ARTRITIS Monografia Final
ARTRITIS Monografia Final
ARTRITIS Monografia Final
TECNOLÓGICO PRIVADO
ESPECIALIDAD FISIOTERAPIA Y
REHABILITACION
MONOGRAFÍA
“LA ARTRITIS”
CURSO:
CICLO:
II
AUTORES:
ASESOR:
CECILIA MAIHUAY C.
LIMA – PERU
2016
DEDICATORIA
Se trata de un trastorno inflamatorio grave, que afecta a hombres y mujeres de todas las
edades por igual, con un pico de incidencia en jóvenes adultos (25 - 35 años) y mujeres
premenopáusicas (alrededor de 50 años). El porcentaje de población afectado es alrededor
del 0.5 %, un valor llamativo (1).
Sin el tratamiento oportuno, los brotes sintomáticos tienden a ser más frecuentes y
duraderos, hasta provocar una progresiva limitación de la movilidad articular y la aparición
de ciertas deformidades esqueléticas características. Por ello, en ausencia de tratamiento, lo
más habitual es que la artritis reumatoide depare un importante deterioro de la capacidad
funcional y la calidad de vida (6).
INDICE
RESUMEN I
INTRODUCCIÓN II
CAPITULO I
1. LA ARTRITIS
1.1 Definición de Artritis 1
1.2 Tipos de Artritis 2
1.2.1 La Gota
1.2.2 La Fiebre Reumática
1.2.3 La Artritis Reumatoidea
1.2.4 La Artritis o Artrosis Degenerativa
1.2.5 El Lupus Eritematoso Sistémico
1.3 Criterios para la clasificación de la Artritis Reumatoidea 3
1.3.1 Líneas básicas para la clasificación
1.3.2 Criterios
1.4 Etiología 4
1.5 Factores
1.5.1 Genéticos
1.5.2 Ambientales
1.6 Anatomía de las articulaciones 5-6
1.6.1 Los huesos
1.6.2 El cartílago
1.6.3 Membrana sinovial
CAPITULO II
2. MANIFESTACIONES CLÍNICAS 7 - 10
2.1 Cuadro clínico
2.2 Sintomatología
2.3 Pronostico
2.4 Expectativa de vida
CAPITULO III
3 TRATAMIENTO 11
3.1 Objetivos del tratamiento
3.2 Tratamientos no farmacológicos 12
3.2.1 Educación
3.2.2 Reposo y ejercicio
3.2.3 Dieta
3.2.4 Terapia ocupacional
3.2.5 Acupuntura
3.2.6 Estimulación eléctrica transcutánea (TENS)
3.2.7 Termoterapia
3.2.8 Ultrasonido
3.2.9 Laser (terapia de baja frecuencia)
3.3 Tratamiento farmacológico 16
3.3.1 Analgésicos
3.3.2 Antiinflamatorios no esteroides (aines)
3.3.3 Fármacos modificados de la enfermedad (FARMES)
3.3.4 Metotrexato
3.3.5 Agentes biológicos
3.4 Tratamiento Quirúrgico 18
3.4.1 Sinovectomía
3.4.2 Osteotomías
3.4.3 Artroplastía
3.4.4 Artrodesis
CAPITULO VI
4 IDEAS FINALES 21
4.1 Vivir con artritis reumatoide
4.2 Puntos para recordar
5 CONCLUSION 22
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS 23
ANEXOS 25
CAPITULO I
1. LA ARTRITIS
1.1.- Definición:
Afecta con más intensidad a unas articulaciones que a otras, principalmente a las más
móviles como las manos y los pies, los codos, los hombros, las caderas, las rodillas y los
tobillos. Hay algunas que nunca se ven afectadas.
1
1.2.- Tipos de Artritis Reumatoide:
Hoy en día hay más de 100 enfermedades diferentes que tienen como síntoma básico la
inflamación de las articulaciones. Se pueden dividir en 10 clases diferentes de
enfermedades.
Cada una tiene un pronóstico, evolución y tratamiento diferente, algunas de las más
conocidas son:
1.2.1 La Gota
Que se asocia con el desgaste de las articulaciones por el paso del tiempo por lo
que es muy frecuente en personas de edad (mayores de 50 años).
2
1.3 Criterios para la clasificación de la Artritis Reumatoidea (13)
1.3.2 Criterios:
a) Rigidez matutina que dura una hora antes de que se alcance la mejoría
funcional máxima
b) Artritis de tres o más áreas articulares observadas simultáneamente por un
médico, con tumefacción de partes blandas o derrame articular, no
solamente sobre áreas con hipertrofia ósea.
c) Las catorce áreas articulares que se pueden afectar son: interfalángica
proximal, metacarpo falángica, muñeca, codo, rodilla, tobillo y metatarso
falángica.
d) Artritis de las articulaciones de la mano
e) Artritis simétrica: afectación simultánea de las mismas áreas articulares en
ambos lados del cuerpo.
f) Nódulos reumatoideos: nódulos subcutáneos sobre las prominencias óseas,
superficies extensoras o regiones yuxta articulares, observados por un
médico.
g) Factor reumatoideo sérico: demostración de concentraciones séricas
anómalas de factor reumatoideo por cualquier método con el que el
resultado haya sido positivo en menos del 5% de personas de control
normales.
h) Alteraciones radiológicas: alteraciones típicas de AR en radiografías
posteroanteriores de radio y muñeca, como erosiones o descalcificación
ósea inequívoca, localizadas en las zonas adyacentes a las articulaciones
afectadas.
i) Los criterios de la a-d deben estar presentes durante al menos seis semanas.
j) Los criterios de la b-e deben ser observados por un médico.
3
1.4 Etiología:
1.5 Factores
1.5.1.- Genéticos:
4
1.5.2.- Ambientales:
Las articulaciones son las estructuras que conectan los huesos entre sí
y proporcionan el necesario grado de movilidad y estabilidad a los distintos segmentos
esqueléticos. Algunas son fijas, pero la mayoría son más o menos móviles.
Las articulaciones móviles, que son las que se afectan en la artritis reumatoide, están
formadas por los extremos de dos o más huesos y por otros componentes no menos
importantes, como son el cartílago articular, la cápsula articular y la membrana sinovial7.
5
1.6.2 El cartílago articular:
6
CAPITULO II
2. MANIFESTACIONES CLÍNICAS:
2.1.Cuadro clínico:
El inicio de los signos de inflamación articular suele ser insidioso, con síntomas
prodrómicos de malestar, pérdida de peso, alteraciones vasomotoras y dolor
periarticular vago o rigidez. Con menor frecuencia el inicio es agudo y al parecer
estimulado por una situación agresora, como infección, cirugía, traumatismo, tensión
emocional o posparto (11).
7
Este período prodrómico puede persistir durante semanas o
meses, y no permite la realización del diagnóstico. La sintomatología específica
aparece habitualmente de forma gradual con una afectación poliarticular, en especial
de manos, muñecas, rodillas y pies, y por lo general en forma simétrica.
Aproximadamente sólo el 10% de los pacientes tienen un inicio agudo y con la
aparición rápida de una poliartritis que se suele acompañar de sintomatología general
que consiste en fiebre, linfadenopatía, y esplenomegalia (10).
2.2 Sintomatología:
Aproximadamente 2/3 partes de los pacientes comienza de forma gradual con fatiga,
anorexia, debilidad generalizada y síntomas musculo esqueléticos vagos, hasta que se
hace evidente la sinovitis. Este período puede durar semanas o meses. Los síntomas
específicos comienzan en forma gradual con afectación poliarticular (manos,
muñecas, rodillas y pies y por lo general simétrica). En aproximadamente el 10% el
comienzo es más agudo y cursa con la aparición rápida de una poliartritis que se suele
acompañar de fiebre, linfa adenopatías y esplenomegalia. En 1/3 parte los síntomas
pueden estar limitados inicialmente en una o varias articulaciones. Por lo general
simétrico, aunque el patrón asimétrico también puede presentarse (9).
8
El diagnóstico es fundamentalmente clínico, sus características son poliartritis lenta
progresiva con tendencia a la simetría, rigidez matinal, edema articular fusiforme en
etapas iniciales, desarrollo subsecuente de deformidades típicas, nódulos subcutáneos
y FR positivo (10).
Síntomas
Limitación de movimientos.
Hinchazón de las articulaciones.
Dolor en la articulación
Temblor en extremidades, dedos...
Pérdida progresiva de fuerza.
Deformación de la parte del cuerpo afectada (manos, pies, etc.)
incrementándose con el tiempo impidiendo a la persona moverse con
libertad.
2.3 Pronostico:
La artritis reumatoide es una enfermedad con un espectro muy amplio y variado, que
abarca desde las formas más leves de la enfermedad que precisan escaso tratamiento
y compatibles con una vida completamente normal, hasta las formas más graves de la
misma que pueden llegar a acortar la esperanza de vida del paciente, dado que, sobre
todo en procesos de larga duración, como en la mayoría de enfermedades crónicas
que afectan al aparato músculo-esquelético, existe probabilidad de que surjan
complicaciones secundarias.
9
Es más probable que se presente la remisión en el primer año y la probabilidad
disminuye con el tiempo. Entre 10 y 15 años después de un diagnóstico, cerca del
20% de las personas presentan remisión. Más de la mitad (50 al 70%) de las personas
afectadas pueden trabajar tiempo completo. Después de los 15 ó 20 años, el 10% de
los pacientes llega a estar severamente discapacitado y son incapaces de realizar
tareas sencillas de la vida diaria, como lavarse, vestirse y comer.
La expectativa de vida promedio para un paciente con este tipo de artritis puede verse
reducida entre 3 y 7 años y quienes presentan formas severas de esta artritis pueden
morir de 10 a 15 años más temprano de lo esperado. Sin embargo, a medida que
mejora el tratamiento para la artritis reumatoide, la discapacidad severa y las
complicaciones potencialmente mortales parecen ir disminuyendo (12).
10
CAPITULO III
3 TRATAMIENTO:
Considerando que no existen maniobras que permitan prevenir la aparición de la AR, los
objetivos del adecuado manejo de la AR son el poder realizar un diagnóstico precoz e
iniciar una terapia efectiva lo antes posible. Con ello se pretende aliviar las molestias,
mantener una función normal y prevenir o minimizar el daño estructural. La meta
terapéutica debiera ser la remisión de la enfermedad y si ello no es posible, intentar el
mínimo grado de inflamación posible (14). Para el logro de estos objetivos terapéuticos se
requiere el uso coordinado y juicioso de diferentes opciones terapéuticas, tanto
farmacológicas, como no farmacológicas.
11
Son muy importantes las medidas generales de educación, reposo adecuado, terapia
física y terapia ocupacional. A todos los enfermos con AR se les debe aconsejar para
que alternen períodos de reposo (de modo de disminuir la inflamación debida a estrés
mecánico) con períodos de actividad articular (para mantener los rangos de movilidad
articular y la potencia muscular). Hay que individualizar cada paciente para indicar
férulas de reposo en la muñeca, bastones, muletas o aparatos ortopédicos de apoyo.
Existe consenso general acerca de que la progresión radiológica con destrucción
gradual del cartílago y del hueso, que conduce a deformación articular, ocurre
invariablemente en la mayoría de los pacientes. Los estudios prospectivos a largo
plazo en la AR señalan una declinación progresiva de la capacidad funcional a lo
largo del tiempo. Este curso es poco influido por el tratamiento farmacológico, a
menos que se inicie muy precozmente el uso de drogas antirreumáticas. Esta situación
exige que en la AR se establezca el diagnóstico correcto rápido para iniciar un
tratamiento oportuno. En otro grupo de enfermos no ocurre esta destrucción articular,
pero desgraciadamente no es lo más común.
3.2.1 Educación:
Un aspecto importante es que el paciente acepte su enfermedad, aprenda a vivir con
ella y se transforme en un colaborador activo en su tratamiento y la toma de
decisiones. Cuando el tratamiento no logra un completo control de la enfermedad es
frecuente que los pacientes tengan problemas emocionales; por ello, el rol del equipo
de salud educando al paciente y su grupo familiar así como dando apoyo durante el
proceso de la enfermedad, son primordiales.
12
El dolor y la inflamación llevan al paciente a reducir su nivel de actividad y ello a su
vez conduce a una mayor pérdida de la movilidad, contracturas y atrofia muscular. Se
ha demostrado que ejercicios para fortalecer la musculatura (ya sea isotónicos,
isométricos o isokineticos) realizados 1 o 2 veces por semana mejoran la
funcionalidad (16).
3.2.3 Dieta:
13
3.2.4 Terapia ocupacional:
3.2.5 Acupuntura:
14
3.2.7 Termoterapia:
3.2.8 Ultrasonido:
15
3.2.9 LASER (Terapia con láser de baja intensidad - LLLT):
3.3.1 Analgésicos:
Los analgésicos puros así como los opiodes son fármacos que tienen un rol
coadyudante en el manejo del dolor de los pacientes con AR. No tienen un efecto
específico sobre la enfermedad por lo que nunca deben usarse como monoterapia. De
los analgésicos simples, el paracetamol y el metamizol pueden ser usados
considerando las características individuales de los pacientes. Los opiodes más
comúnmente usados, solo son asociados con el paracetamol, son la codeína y el
tramadol.
Los AINEs son de uso habitual en el tratamiento de la AR, ya sea como una ayuda
sintomática mientras se realiza y confirma el diagnostico, o durante el tratamiento de
mantención como coadyudantes en el manejo del dolor y la inflamación. Es
importante señalar que ellos no alteran el curso de la enfermedad, por lo que no deben
usarse como tratamiento único y nunca sustituyen a los FARMEs. Diferentes estudios
han evaluado el beneficio comparativo del paracetamol con los AINEs. En una RS
que incluyó 4 estudios de cross-over los AINEs fueron preferidos por los pacientes o
16
el investigador más frecuentemente que el paracetamol. En el estudio con mayor
tamaño de muestra, 37% de los pacientes prefirieron el ibuprofeno y 13% el
paracetamol (26).
Los diferentes AINEs tienen eficacias similares en cuanto al alivio del dolor y la
inflamación articular que presentan los pacientes con AR. Si bien son eficaces,
múltiples estudios han demostrado que su uso se asocia a un mayor riesgo de sufrir
eventos gastrointestinales (GI), que van desde síntomas menores a eventos serios
(ulceras, perforaciones y sangramiento) con mortalidad asociada (27).
Se definen como tales aquellos farmacos que son capaces de prevenir o al menos
reducir el daño articular producido por la enfermedad, y de esa manera preservar al
máximo la articulación y la función articular. Si bien aún se estudia la mejor opción
terapéutica, es un hecho establecido que el tratamiento adecuado de la AR requiere
del uso precoz de FARMEs, lo cual es avalado por múltiples ensayos clínicos y
algunas revisiones sistemáticas (28).
3.3.4 Metotrexato:
17
3.3.5 Agentes biológicos:
El cirujano ortopedista, capaz de reconstruir una articulación destruida, debe también ser
consciente de la diversidad de las enfermedades asociadas, las cuales tendrán su impacto en
éxito del tratamiento quirúrgico. Se estima que aproximadamente10% de los pacientes de
una unidad reumatológica son sometidos a cirugía cada año.
Para asegurar una intervención quirúrgica exitosa, el cirujano debe tener en cuenta lo
siguiente:
I. Evaluar cuidadosamente el paciente preoperatoriamente
II. Planear el manejo intraoperatorio
III. Desarrollar un programa de rehabilitación perioperatorio
IV. Identificar y manejar agresivamente las complicaciones a largo plazo que pueden
ocurrir.
18
De la variedad de procedimientos quirúrgicos que se pueden efectuar, los principales son:
3.4.1 Sinovectomía:
El tejido sinovial que recubre una articulación diartrodial o una vaina tendinosa, es el
primero que manifiesta cambios inflamatorios en AR. Dependiendo del grado de actividad
ocronicidad de la enfermedad, el tejido sinovial puede presentar un amplio rango de
anormalidades. A nivel articular, la hipertrofia sinovial produce distensión y estiramiento
del complejo cápsuloligamentoso que ocasiona inestabilidad. La formación del pannus
adherente erosiona el cartílago articular y el hueso subcondral, con destrucción progresiva
de la superficie articular, colapsos óseos y grandes deformidades. Las estructuras
tendinosas se afectan por invasión sinovial, que puede alterar su irrigación normal y aunado
a la atricción contra huesos erosionados facilita la ruptura. Además, puede haber
compresión de las estructuras nerviosas, especialmente en codo, túnel carpiano o tarsiano.
Existen diferentes maneras de atacar la inflamación sinovial en AR, bien con agentes
físicos, químicos o procedimientos quirúrgicos. Si bien logran la reducciónde los síntomas,
no alteran el curso de la enfermedad. Estas formas de tratamiento se pueden esquematizar
de la siguiente manera:
19
3.4.2 Osteotomías:
3.4.3 Artroplastía:
3.4.4 Artrodesis:
20
CAPITULO IV
4. IDEAS FINALES:
Es importante mantenerse físicamente activo la mayor parte del tiempo, pero a veces debe
volver a reducirse el nivel de actividad cuando la enfermedad empeora. En general, el
descanso es útil cuando una articulación está inflamada o cuando se siente cansado. En
tales ocasiones, realice ejercicios de movimientos suaves, como estiramientos. Esto
mantendrá la flexibilidad de la articulación (31).
Cuando se sienta mejor, haga ejercicios aeróbicos de bajo impacto, como caminatas, y
ejercicios para aumentar la fuerza muscular. Esto mejorará su salud general y reducirá la
presión sobre las articulaciones. Un terapeuta físico u ocupacional puede ayudarlo a
encontrar qué tipo de actividades son mejores y el nivel o ritmo en que debería realizarlas.
Descubrir que se padece una enfermedad crónica es una circunstancia que cambia la vida.
Puede causar preocupación y, a veces, sentimientos de aislamiento o depresión. Gracias a
que los tratamientos han mejorado notablemente, tales sentimientos tienden a menguar con
el paso del tiempo, mientras aumenta la energía y disminuyen el dolor y la rigidez. Hable
acerca de estos sentimientos, que son normales, con sus prestadores de atención de salud.
Estos le pueden proporcionar información y recursos útiles.
Los tratamientos más nuevos son eficaces. Los medicamentos para la AR han mejorado
mucho los resultados de los pacientes. Para la mayoría de las personas que padecen AR, el
tratamiento temprano puede controlar el dolor y la inflamación, y disminuir el daño
articular.
21
Iniciar un tratamiento temprano:
Los estudios demuestran que las personas que reciben un tratamiento temprano de la
AR sienten una mejoría más rápido y más a menudo, y tienen más probabilidades de
llevar una vida activa. También son menos propensos a tener el tipo de daño
articular que lleva a la sustitución de la articulación.
5. CONCLUSION:
A propósito del tratamiento integral de cualquier enfermedad reumática, uno de los logros
sobresalientes en el manejo de la artritis reumatoide es el concepto de que las medidas de
todos tipos (sintomáticos, especiales y específicos) deben ponerse en juego desde el primer
momento, en cuanto se tenga la certeza del diagnóstico.
Hoy se piensa que si la enfermedad es agresiva, el tratamiento debe ser también agresivo.
La artritis es una enfermedad de origen desconocido, sin embargo, se considera que tiene
predisposición genética, es decir, que esta sea hereditaria.
Esta patología se puede presentar a cualquier edad, y afectar a todo tipo de personas, donde
afectará a todo órgano o tejido sano.
A la fecha no se ha encontrado cura para ella, sin embargo, hay tratamientos destinados al
control de estas, los cuales le brindaran al paciente una mejor calidad de vida.
Cabe resaltar la importancia de un diagnóstico temprano, para un mejor pronóstico, por lo
que la promoción de la salud, es muy importante.
22
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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ANEXOS:
25
PARTES DE UNA ARTICULACIÓN:
26
Rx DE ARTRITIS REUMATOIDES:
27
ARTRITIS REUMATOIDE
28