CORIAT B - La Robótica
CORIAT B - La Robótica
CORIAT B - La Robótica
Aborda
aspectos bsicos de ese tema complejo
haciendo un gran esfuerzo por explicarlo s
de una manera asequible pero rigurosa al mismo
LA ROBOTICA
tiempo. Temas como el concepto de robot
y sus diferentes definicion es, la expropiac in del
saber obrero, los lmites actuales de la robtica y sus
posibles lneas de desarrollo , el dominio Benjamin Coriat
del mercado de la robtica, la robtica y el paro ...
estn desarrolla dos en este libro.
El autor es francs y el libro se edit en Francia. En l
no se aborda el momento actual de la robtica
en el Estado espaol. Pero las ideas, el mtodo y el
punto de vista del autor nos parecen de gran utilidad
para los y las trabajado ras de aqu, para los que
sufren el impacto directo de los robots en las fbricas
o , simpleme nte, para los que estn interesado s
en seguir de cerca la evolucin de unas tcnicas que
en el espacio de no muchos aos ocuparn un
lugar importan te tambin en nuestra sociedad.
En cualquier caso, estamos convencid os
que es un material de gran utilidad para la reflexin
y que, cuando menos, contribui r a tener un
conocimi ento ms profundo y completo sobre el papel
de los robots en esta nueva etapa de acumulac in
de capital en medio de una de las crisis ms profundas
en la historia del capitalism o.
Editorial Revolucin
.~
lA ROBOTICA
Benjamin Coriat
Editorial n Revolucin
~ ....
_,_ ,
-> 1 ; ' ~~': \
',
..
'
,1
'
"
''
.t
.J,;' .~' .
:
..
;
'l
~ ,-
Presentacin
5
gran actualidad y de sumo inters para los y las sindi-
calistas de izquierda de aquz' y para cuantas personas pequeo en comparacin con el de otros palses capi-
quisieran adentrarse en el complejo mundo de las nue- talistas avanzados, aumentar en los prximos aos Y
vas tecnologlas y su significado en una sociedad capi- cubrirn un espectro ms amplio que el de las grandes
talista. industrias del automvil y las empresas con grandes
cadenas de montaje.
Entramos en contacto con la Editorial Revolucin Los empresarios y sus valedores polz'ticos e ideol-
les interes el proyecto y nos pusimos manos a la obr~ gicos gastan millones en propaganda para hacernos
para editarlo.
creer que la computarizacin, la automatizacin o los
"La robtica" es un libro de divulgacin. Aborda robots liberarn a los trabajadores y trabajadoras de
aspectos bsicos de ese tema complejo, haciendo un los puestos de trabajo insalubres y rutinarios Y les per-
gran esfuerzo por explicarlos de una manera asequible, mitirn hacer un trabajo creador, limpio y descansado.
pero ngurosa al mismo tiempo. Temas como el con- Tambin nos anuncian que con el tiempo y un poco
c~pt?. de robot y sus diferentes definiciones, la expro- de paciencia se reducir la jornada de trabajo, aumen-
pzaclOn del saber obrero, los ll'mites actuales de la ro- tar el ocio creador y la calidad de vida.
btica Y sus posibles lz'neas de desarrollo, el dominio Pero la realidad dista mucho de corresponder a las
. del mercado de la robtica, la robtica y el paro...
estn desarrollados en este librito. simplificaciones y falsedades interesadas del capital.
Ni la maquinaria se renueva para facilitar las tareas a
El autor es francs y el libro se edit en Francia
los obreros -se renueva, por el contrario, para alcan-
En l no se aborda el momento actual de la robtic~
zar objetivos mucho menos humanos, para obtener
en el Estado espaol. Pero las ideas, el mtodo y el
ms plusvalla y para reforzar el dominio del empresa-
punto de vista del autor nos parecen de gran utilidad
1 .'
rio sobre el proceso de trabajo- ni los robots reducen
pa~a los Y las _trabajadores de aqul, para los que sufren la jornada de trabajo. Basta mirar a Japn para com-
elzmpacto dzrecto de los robots en las fbricas o, sim-
prender que las cosas no son tan bonitas como nos las
plemente, para los que estn interesados en seguir de pintan.
cerca la evolucin de unas tcnicas que en el espacio
En los palses capitalistas avanzados y en los inter-
de no muchos aos ocuparn un lugar importante medios se est produciendo un enorme despilfarro del
tambin en nuestra sociedad. .
bien ms precioso de la sociedad: la capacidad creado-
Los robots estn presentes en SEAT, en FORD,
ra y la inteligencia del ser humano. Millones de traba-
en FASA ... Las cooperativas de Mondragn han sus- jadores y trabajadoras manuales calificados estn en
crito un acuerdo con la firma japonesa HITA CHJ para
paro por largos periodos, mientras en todos esos paises
fabricar y comercializar robots. El Estado est impul-
hay un montn de necesidades sociales insatisfechas.
~ando. mediante crditos y subvenciones, planes de Y este paro estructural se va a mantener porque, entre
mvestzgacin y desarrollo que incluyen su fabricacin.
otras cosas, est fomentado por la introduccin de
Y, aunque el parque de robots en el Estado espaol es
nueva tecnologla, la sustitucin de seres humanos por
6
7
.;
' '~
o eliminan ms ma no
de obra de la que se utiliza
para fabricarlas. Y esta
contradiccin, ho y por ho y,
,'"< bajo el capitalismo, no
tiene salida.
Podrfan ser las cosas diferente
Pero para ello hace falta rom s? Evidentemente.
per el sistema, que la
produccin no est en funci
n de la obtencin de '
plusvalta y la revalorizacin .
, ,
sin ltmites del capital,
sino en funcin de las necesidad
es sociales y al servicio
.
,:
de los trabajadores y trabajado
ras .
En una entrevista que le hizo
i : al Pueblo al au tor de este libr el quincenario Servir
o,
gacin previa a su publicaci decta que la investi- ' '~
n le haba obligado a . '
cambiar algunas de sus ideas
y a dar ms importancia
que hasta entonces al papel de
las nuevas tecnologas
en la reestructuracin del pro
ceso productivo del ca-
pitalismo.
No sabemos si la lectura del .
ideas del lector. En cualquier libr o modificar las
caso, estamos convenci-
8
9
jr'
. ~ /':,
; \' AGRADECIMIENTO
~: ' 1
i,
.'-.
11
. ..,.~
'i
'
INTRODUCCION
LOS ROBOTS
ESTAN ENTRE NOSOTROS
~ :
'.
la electrnica vienen a aadirse a las disciplinas co- tecnolgicos planteados a la automatizacin.
16
17
,Y
18 19
pulac10nes -carg a y descarga, alimentacin, montaje,
levan tamie nto- o de operaciones de transformaciones
propiamente dichas, soldadura, pintura, torneado,
fresado, desbarbado.
Apostar por estas novedades es, evidentemente, de
suma importancia. Incluso se ha anunciado ya por ah, PRIMERA PARTE
la fbrica sin homb res, la solucin por fm hallada -y
durante tanto tiempo soa da- a las huelgas y reivin-
dicaciones obreras. Tendr ocasin de mostrar que es-
ta perspectiva de la "fbrica sin hombres" que a ttulo
experimental ya no es inalcanzable, no es en un futu-
ro prximo, concebible bajo las coerciones tecnolgi- EL ROBOT
cas y de rentabilidad propias a toda economa. Pero Y SUS UTILIZACIONES
no es necesario ir a los extremos para poner en evi-
dencia la importancia y la gravedad de los desafos
que conlleva la robtica. En unas economas dura-
mente golpeadas por la crisis, la robtica aparece a la
vez como un facto r de aceleracin de los desequilibrios
- los que se refieren al empleo y al trabajo principal-
ment e- y como una base de reorganizacin de la eco-
nomf a industrial, capaz, bajo ciertas condiciones que
habra que precisar, de favorecer las adaptaciones a
las que en cualquier modo es imposible sustraerse. La gran prensa, la TV, las imgenes que difunden
Como toda mutacin tecnolgica de importancia, nos han acostumbrado a una determinada imagen del
la robtica abre un cierto nmero de posibles y con- robo t y a una determinada idea de sus capacidades.
fieso que tengo la ambicin de dejar claro en este libro En primer lugar, la imagen. Todo el mundo podra
que, entre todas las vas abiertas, no todas inducen a describir un robo t: un soporte de acero del cual sale
mutaciones de la misma naturaleza. un brazo en cuya extremidad formado por una mue-
ca y una mano est fijada una herramienta. Todo ello,
articulado se mueve para efectuar movimientos en el
espacio. E~ cuanto a las capacidades que se atribuyen
a los robots son a menudo infinitas y casi mgicas.
No es algo frecuente hoy da -especialmente cu~
do se trata de reportajes sobre el Jap n- leer descnp-
ciones de fbricas funcionando sin alma viviente -me-
20
21
jor an-, fbricas produciendo robots por medio de
robots?
1 mquinas programables, es decir, capaces de repetir a
ritmo regulado una operacin para la cual han sido
Hay que decirlo claramente: la realidad est a mil prerreguladas. Y son estos tipos de "robots" mucho
leguas de esa imagen. Es cierto que existen robots cu- ms sencillos y mucho menos sofisticados que los nor-
ya concepcin obedece a la morfologa que se acaba malmente presentados, los ms generalizados en la in-
d.e describir. En la industria automovilstica, por dustria.
eJemplo, el robot de pintura corresponde, punto por Lo que se atribuye normalmente. como propio del
punto, a este tipo de robots. Sin embargo, en la ma- campo de la robtica abarca, en realidad, un gran aba-
yora de los casos, son suficientes unos dispositivos nico de mquinas-herramientas, de manipuladores o
mucho ms sencillos. Y como generalmente son tam- de colectores de los que slo unos cuantos tienen in-
bin menos costosos, tanto los constructores como corporados medios electrnicos de recogida o de tra-
los usuarios los prefieren. Por esta razn -consevando tamiento de la informacin. La realidad es que la ro-
el mismo ejemplo, la pintura en la industria automovi- btica es el resultado de una larga evolucin tributaria
lstica- se prefieren utilizar simples "mquinas para de unos progresos efectuados primeramente siguiendo
pintar" ms fuertes y fmalmente ms econmicas. unas lineas separadas y distintas de desarrollo tecnol-
Asimismo, si examinamos las capacidades de los ro- gico antes de que se establecieran coherencias funcio-
bots, nos enfrentamos con una gran variedad de situa- nale~ entre la parte mecnica y la parte electrnica
ciones. Nos encontramos de nuevo con robots "inteli- principalmente, en la concepcin de los medios de tra-
gentes". En el caso del robot, la "inteligencia" est bajo. (cf. para un ensayo de clasificacin cf. Bouchut
definida como una capacidad para captar informacio- (7) y ( 8) (*).
nes sobre su entorno (por ejemplo para un robot pin- Insistiremos en las novedades y principalmente en
tor el.hecho de estimar que la caja del coche que tiene las surgidas con la aparicin de la electrnica. Una vi-
que pmtar no est en su debida posicin) y consecuen- sin clara del significado y del alcance de los cambios
temente para modificar el programa de ejecucin de actuales o futuros tiene forzosamente que p~sar por
las operaciones para las cuales ha sido inicialmente una exposicin de los principales elementos constitu-
programado. Esta capacidad de adaptacin al entorno yentes de los automatismos en las industrias de serie.
es la que aporta al robot la electrnica y la informti- Slo con esa condicin es posible una apreciacin
ca, en lo que se denomina su "logicial". equilibrada de las novedades aportadas por la entrada
No obstante, esta inteligencia suele ser, en general de la micro-electrnica en el taller. En este libro y si-
muy pequea. El robot slo puede captar un nmer~ guiendo la norma ya establecida, se emplear el trmi-
limitado de informaciones sobre su entorno. Asimis- no robtica en su ms amplio significado: designa
mo, su aptitud para modificar las operaciones para las todo tipo de manipuladores y mquinas programables
cuales ha sido previamente programado es reducida
(*). Las cifras entre parntesis se refieren a la bibliografa del fmal del
Se considera forman parte de la robtica unas simple; libro.
'22
23
(a los que se han incorporado o no medios electrni-
cos de tratamiento de la informacin) destinados a la
produccin industrial. Esta definicin incluye asimis-
mo todo tipo de dispositivos ms o menos sofisticados
que se requieren junto a los robots propiamente dichos
Y que. constituyen lo que a veces se denomina la peri-
robtzca (del trmino "periferia"), sector que repre-
senta un mercado dos o tres veces ms importante
que el de la robtica en s.
Manipuladores y
mquinas-herramientas
,,.
'"
;
"'/:(,'.
....
..
,"~ ~~~
"'
:,,-
- los autmatas programables y los calculadores una consola de mando. En la prctica, se suelen utili-
...
-las mquinas-herramientas programables. zar sobre todo, en la manipulacin de cargas pesadas
o para efectuar manipulaciones en zonas de actividad
l. Los manipuladores peligrosa para el hombre. En la industria n~clear se
suelen emplear especialmente cuando es preciso efec-
tuar manipulaciones en las partes del proceso exp~es
El grado cero de la robtica est constituido por tas a radioactividad. La tcnica de base de los mampu-
los brazos de carga que son manipuladores sencillos ladores se ha desarrollado igualmente en lo que se lla-
utilizados para alimentar mquinas o para garantizar ma desde ahora la ''tele-operacin" o la robtica de
desplazamientos de un recorrido de produccin a otro. exploracin. Se trata principalmente d~ mquinas uti-
En la prctica suelen. completar el dispositivo de las
lizadas; por ejemplo, para la exploracin ~e los f?n-
cintas transportadoras en las "cadenas" y contribuyen dos marinos, la bsqueda de petrleo o la mstalacin
-al reducir el nmero de intervenciones humanas- a
de plataformas de sondeo. . .
una mayor fluidez en la circulacin de las piezas y del Ms all del telemanipulador comienza ~1 mbito
producto por el taller. Limitados a unos movimientos de los materiales verdaderamente progra1~ables para
determinados, privados de toda "inteligencia", son de unas series dadas de operaciones. Todos ellos estn
un uso muy coercitivo ya que estn regulados para dotados de equipamientos electrnicos de mando o
una operacin dada, y difcilmente se pueden repro- de control, aunque en proporciones muy variables.
gramar en caso de que la operacin hubiera de modifi- El manipulador programable "ejecuta las rdenes
carse. Por esta razn, son considerados como disposi-
tivos rgidos. registradas correspondientes a las posiciones suc~si~~~
que le hace tomar durante una fase de aprendtzaJe
Los telemanipuladores son unos brazos de carga un (Boletn Tcnico Renault nmero 33). Como no posee
poco ms elaborados. Poseen un nmero mayor de
"inteligencia" propia (capacidad de orientarse en ~n
grados de libertad (*), pero han de ser manejados
. ;. medio sometidos a variaciones) slo efecta operaclO-
obligatoriamente por un hombre instalado detrs de }
28 29
!
r~r~.;;:
'
.
:: ' ' f, ~:}~~i...
' ,.,
,{,.~
:'
~
.
,..
30 31
~-~fy( .... , .
'''!''
3'2 33
El concepto de robot
l. Algunas definiciones
Entre las definiciones ms restrictivas y rigurosas
del robot, se puede citar especialmente la propuesta
por la Rgie Renault. En una nota tcnica destinada a
35
. . , ;. . <~: : ' .
. ~,;fii1~{~:~!.r'"\ '-~~~- 7""t,-;t,~~ J ~!f,
,r.: .1,.. ;: , . : .,17', . , ~.\:r,.' Ir~:~. t't,'.'',
~ .\
!
1
36. 37
.. , ..
"stocks" de robots en funcionamiento en los diferen- concierne al sistema de "mando" de las herra-
tes pases. mientas y de los medios de trabajo del robot.
A medio camino entre estas dos definiciones extre- E~te sub-conjunto es el que se denomina la "in-
mas, la ISO (Organizacin internacional de normaliza- teligencia" del robot.
cin) propuso en 1982 una definicin que, con algunas Conviene subrayar que, si las funciones de motori-
variantes menores posteriores, tiende a imponerse. Se- zacin Y de manipulacin son esenciales en la deter-
gn esta defmicin, "el robot industrial es un manipu- minacin de la gama de operaciones que puede ejecu-
lador multifuncional, programable, cuya posicin es tar el robot, slo por medio del progreso de la electr-
controlada automticamente, posee diversos grados nica aplicada (*) ha sido posible franquear estadios
de libertad y es capaz de coger materiales, piezas, he- decisivos de la robtica industrial. De hecho, si nos
rramientas o aparatos especializados para hacerles ex- atenemos a la dimensin de "mando-control" del ro-
perimentar operaciones programadas". Una definicin bot, la automatizacin de las operaciones en la pro-
de este tipo parece, en efecto, aceptable en la medida duccin industrial resulta de la puesta en prctica de
en que incluye en lo esencial las propiedades que se un doble principio:
ha acordado reconocer a un robot y que lo diferencian Un principio de recogida de datos fsico-qumi-
de cualquier otro material. cos (concernientes a las operaciones y procesos)
y de conversin de estos datos en seales elctri-
cas: es la funcin que realizan los "sensores";
Las caracterfsticas distintivas del robot Un principio de tratamiento de esos datos, de
toma de decisiones y de transmisin de esas deci-
Considerando el robot, primero como objeto tc- siones a las herramientas (o ejecutores): es la
nico, resultado de una historia particular de las m- funcin de los "procesadores". Los progresos rea-
quinas que ha permitido la convergencia de disciplinas lizados en la miniaturizacin de los componentes
tecnolgicas distintas, pero tambin siguiendo las fun- electrnicos son los que han permitido -con la
l
ciones y tareas industriales que puede asegurar, se puesta a punto de los "microprocesadores"- do-
puede delimitar con mayor precisin la nocin de tar las mquinas automticas de medios de clcu-
robot. lo Y de mando. En cuanto a las investigaciones
Como sistema tcnico, el robot puede ser descrito efectuadas sobre los sensores ("visin" y recono-
constituido, en el fondo, por dos grandes sub-conjun-
tos:
- el uno, mecnico, hidrulico y elctrico, reagrupa ~:> La ~lectrnica en ,su ~ignificado ms amplio puede ser definida como
el c~nJ~to de las tecmcas que utilizan las variaciones de las magnitu-
las funciones de motorizacin y manipulacin des ele~~1cas {campos electromagnticos, campos elctricos), para captar,
- el otro, electrnico e informtico tiene la carac- transm1ti1 o explotar una informacin". {En Enciclopedia Universalis
terstica de recoger y tratar las informaciones y art. Electronique). '
38 39
,,
.:.,,. cimiento de las fonnas, "tacto" y piel artificial...), Un esquema terico tal (que pone por delante la
-~ ~f: aunque se han hecho progresos significativos en
importancia de las funciones de memorizacin y de
' este terreno, lo esencial est an porvenir, tenien- lculo) no debe, sm embargo, enmascarar 1a ampmua
do en cuenta estos diferentes principios, podemos de las dificultades tecnolgicas con las que tropieza el
representar el "esquema lgico" de funcionamien- desarrollo de los robots industriales, por la misma ra-
, : to de un robot. zn de la diversidad de funciones (y por tanto de dis-
ciplinas) que simultneamente deben ser llevadas a
cabo. En el terreno de la electrnica, los progresos
/~ t ; .. ESQUEMA LOGICO DEL ROBOT.
' ' !
Memoriai'
datos (sensores)
Herramientas
objeto de trabajo
.,:
~t...... ~;~"
'.~
~
miten diferenciar y clasificar las diferentes "genera-
ciones, de robots, los ritmos de puesta a punto son
ms lentos de lo previsto. Por ltimo, en lo que con-
. l\ cierne a los aspectos hidrulicos o mecnicos del robot,
.'
.... ,
i .,
correspondientes a funciones esenciales de motoriza-
cin y transmisin, los progresos son lentos, tratndo-
Clculo se esencialmente de tcnicas tradicionales para las que
no se vislumbre "revoluciones" a corto plazo. "Un
motor contina siendo motor, nos confiaba un dise-
'; 1 ador de robots, y por ahora no sabemos obtener
Comentario una gran potencia sin volumen; la potencia de un mo-
_En el sentido A-B..C, el robot transmite asusherramientas tor limita por s misma, de manera estricta, la natura-
(manipuladores) instrucciones para efectuar las opera- leza de las prestaciones a las que el robot puede pre-
. ciones. tender". Estos lmites "tecnolgicos" tienen diversas
' . b ' '
_ En el sentido A'-B'-C', el robot toma informac1on so re repercusiones en el coste de los robots. En fecto; se ' :~
la manera en que esas operaciones se desarrollan. . . estima en promedio que, en el campo de la robtica los
' - Si es necesario (segn las informaciones que le proVIenen costes relativos de ios diversos componentes son un
por el camino A'B'~'~, modifica las .instrucciones a sus 20 por ciento del coste total para la parte electrnica,
., manipuladores transm1tidas por el cam1no A-B-C . ; . un 50 por ciento para la parte mecnica y el resto pa-
ra la parte hidrulica. Hay que subrayar aqu un pun-
40
41
~. '
to importan te. En lo relativo a la incidencia relativa-
mente pequea de esta tecnologa en el coste de fabri- Los robots de transferencia (o "pick and place")
cacin de los robots, los progresos previsibles de la elec-
trnica, aunque an pueden jugar un papel importan te El calificativo de "robot de transferencia" o pick
en lo que concierne a puesta a punto de gamas de ro- and place (coger y poner) expresa muy felizmente las
bots y de autmatas con capacidades ms amplias, sus caractersticas particulares de estos robots. Desprovis-
efectos no tendrn la importancia a menudo anuncia- tos de herramientas en sentido propio, se utilizan para
da sobre los precios de coste. En este terreno, la estan- asegurar el desplazamiento de una pieza de uno a otro
darizacin y las ventajas extradas de la produccin lugar. Se pueden dar muchos ejemplos de su utilizacin
en la industria.
de robots en pequeas o medianas series jugarn, sin
duda, en el futuro un papel ms importan te en la baja Uno de los ms plsticos concierne a la automatiza-
de los precios de coste y de venta de los materiales, cin de las prensas. Entre las diferentes prensas circula
que el que puede esperar de los progresos de la mi- una cinta transportadora. En la organizacin tradicio-
cro-electrnica. nal, un obrero situado ante cada prensa coge las hojas
Para concluir este punto, hay an que precisar que de chapa una a una, las dispone sobre la matriz y
el coste de adquisicin de lo robots no lo es todo. acciona el piloto de la prensa. Una vez efectuada la
Para poder funcionar, es necesario que los talleres es- operacin, recupera la chapa en la que la prensa ha
tn preparados para acogerles. Y aqu, adems, los imprimido una forma (un ala, un cap) y la vuelve a
costes de ingeniera- logicial (de ordenadores) son pe- poner en la cinta que circula entre las prensas. El robot
queos (7-16 por ciento del coste total),en relacin a "pick and place" efecta desde ese momento todas esas
los materiales (40-60 por ciento) o a la instalacin operaciones de forma automtica. Con la cadencia pre-
(29-36 por ciento). rregulada, coge las hojas de chapa, las posiciona en la
Todos estos elementos indican que si bien el abara- prensa, las recupera tras el movimiento del piloto, y las
"transfier e" al siguiente puesto.
tamiento de los precios de fbrica de las instalaciones
automatizadas es previsible, no hay que esperar mila- El robot "pink and place" est as perfectamente
gros en este terreno. adaptado a operaciones simples y repetitivas. Es nece-
sario, sin embargo, subrayar que, en general, no puede
trabajar tan deprisa como un hombre. De este modo
2. Los diferentes tipos de robots slo puede rentabilizarse porque puede funcionar casi
las veinticuatro horas del da (un trabajo nocturno pa-
Si consideramos los robots desde el punto de vista ra operaciones de este tipo est prcticamente exclui-
do para un hombre).
de las funciones que deben asegurar al sustituir los
trabajos efectuados de forma manual, es conveniente Cuando los ritmos de trabajo son lentos (el robot
"transfier e" la pieza entre mquinas de fabricacin
distinguir diferentes tipos de robots.
42 43
e,.:- 1, ','-1' ' , '
'.,..'r,
''
que efectan operaciones suficientemente largas), este de la soldadura de los Rl8 de Renault en Flins o de
tipo de robot parece particularmente adaptado. Es as los R9 y Rll en Donai). (Se encuentran en Engelber-
que se utiliza a menudo en talleres de fabricacin para ger ( 19) descljpciones muy precisas sobre instalaciones
distribuir, retomar y transferir las piezas a un conjun- de este tipo). Para soldaduras ms complejas (al arco
to de mquinas-herramientas dispuestas en lnea o en o a la llama), los problemas tecnolgicos a resolver li-
semicrculo a su alrededor. mitan an las tasas de progresin de la robotizacin,
aunque sta tambin se desarrolla y tenga ante s un
gran porvenir~
Los robot de ensamblaje ''
El robot de ensamblaje difiere del robot de transfe- Los robots de proyeccin o de "trayectoria continua" ',
44 45
segmentos de produccin precisos y determinados.
En el ensamblaje (de piezas elementales) o el montaje
final, los robots estn nicamente ante sus primeros
ensayos. Mucho depende aqu de los sensores que de-
terminan las capacidades de orientacin del robot en
el espacio. En los prximos aos, es en este terreno
en el que se focalizarn las investigaciones y donde se
jugar la jerarqua de las dependencias tecnolgicas!
Las tendencias
de la robtica
46 47
Y-i."" r ;:
'. ',""
de una cierta "universalidad" y en consecuencia, utili- pinturas ... segn el caso), cada una est concebida para
zables para usos alternativos. alcanzar rpidamente, mediante sencillas manipulacio-
Esta segunda tendencia reviste un gran inters para nes (como el cambio de herramientas, la introduccin
el futuro. Por esta razn conviene ofrecer algunas pre- de cassettes que modifican los programas de operacio-
cisiones sobre ella. Lo haremos a partir de la experien- nes), una cierta "poli-actividad".
cia de la Renault. Recordemos que la Renault -de manera muy signi-
Las investigaciones en materia de robots adaptados ficativa- insiste en defmir al robot como bsicamente
a la produccin en serie se iniciaron en 1974 por la "una mquina universal de manipulacin ... " (33).
Renault y han conducido a la puesta a punto de toda Evidentemente, en el actual estado de cosas, el ob-
una gama de robots. Esta gama se presenta bajo la for- jetivo de conseguir robots literalmente "universales",
ma de 4 robots de base (*): un robot "horizontal", no puede ser ms que terico. Sin embargo, este obje-
un robot ''vertical" y un robot "puente"; hay que tivo es, en la actualidad, una de las ideas-fuerza que
aadir a estos tres robots, correspondientes a usos di- gua e impulsa el desarrollo de la robtica en la etapa
ferentes pero bsicamente de una misma concepcin, de sus inicios. Los robots "horizontales" o ''verticales"
.,_,_
un cuarto robot, ste de concepcin original y deno- capaces en principio de ejecutar tareas tan dispares
como la soldadura, el troquelado, la manutencin, la '
minado: "robot de proyeccin o de puntura".
El anlisis de algunas de las caractersticas de esos palletizacin o la despaletizacin... son una buena
robots constituye una introduccin al tema de las ten- muestra de esa voluntad, y de esa tendencia hacia la
dencias de la robtica tanto ms importante cuanto "universalidad".
que se puede considerar que Renault es, en ese campo,
muy representativo de las opciones tomadas por los
principales constructores del mundo. 2. La modularidad
Hay que subrayar, cuando menos, tres caractersti-
cas: Esta particularidad de los robots consiste en que es-
tn constituidos de mdulos autnomos, lo que per-
mite la puesta a punto, mediante un sencillo "acopla-
l. La ''universalidad" miento", de mdulos standards de "estructuras" o de
robots adaptados a tareas diferentes. Corno subraya la
Aunque en la prctica cada "estructura" (o variedad Renault: "No es deseable standarizar un solo tipo de
de robot) est mejor adaptada a un tipo dado de ope- robot porque no podr resolver con sultura todos los
racin (soldadura, manipulacin de cargas pesadas, problemas que se presenten. Esto es contrario a los in-
tereses de las mquinas standard universales. Esta in-
(*}.Una presentacin tcnica de las cualidades y de las capacidades de
estos robots se halla en un folleto de la RNUR. "Robots industriels", compatibilidad se resuelve mediante una standariza-
editado en 1979 (ver bibliografa, nm. 33). cin de los elementos o de los mdulos que constitu-
48 49
-:~.{~~~
' ' '~ 1r_ ;
'' ... ~~
yen los robots" (33). Partiendo de una docena de m- vista, su inters reside en que, en definitiva, permite
dulos de base se pueden obtener de esta maneras ''va- una simplicidad relativamente grande del mtodo de
rias morfologas'' relativas a una misma "familia". programacin. Ilustraremos este caso con los "robots
La capacidad de efectuar pluri-operaciones, la mo- pintores". La particularidad del robot pintor consiste
dularidad y la standardizacin de los componentes en que su manipulador, (la parte mvil destinada a la
elementales acumulan sus efectos para llegar a estruc- proyeccin de pintura), est reforzado por una estruc-
turas cada vez ms flexibles que permiten tambin tura (dotada de los mismos captadores y de los mismos
una disminucin progresiva de los costos. As, segn accesorios que l), ms ligera y ms manejable: "el
el uso previsto para el robot, se adquieren y se acoplan mueco".
solamente aquellos "mdulos" que permiten obtener "La programacin" del robot se hace de la siguiente
el resultado deseado. Esta manera de proceder pro- manera. El operador, un simple obrero pintor, toma
porciona una evidente agilidad. .. .... .. , , .... el mueco y efecta el trabajo de pintura exterior e
. ' ...., '" ... , - ~- .....~-...;....-.., , .. -~''..:. . interior de las cajas. "El aprendizaje" consiste en que
un calculador registra la posicin cada 20 milsimas
3. El aprendizaje . ,': . , :. : ', f ,,:. o~)' , ;L de segundo. En la prctica el intervalo entre dos posi-
t\'
ciones es tan reducido que se convierte en un registro
:!!. Si examinamos los sistemas 'de mando (la parte en continuo. Se deja entonces a un lado el "mueco",
electrnica e informtica del robot: su "logicial"), el y el robot -mediante una "trompa"- est capacitado
rasgo esencial de los robots que entraron en servicio ya para reproducir exactamente toda la secuencia de
en los aos 70, consiste en que estaban dotados de modos operatorios que ha sido registrada "en conti-
una capacidad de aprendizaje de comportamientos tipo nuo" y "en tiempo real" cuando el mueco era mane-
y en una medida todava reducida, de una capacidad jado por el obrero pintor.
para modificar este comportamiento-tipo gracias a
unas facultades de recogida y de tratamiento de datos .:1'
relativos al entorno. ,. l. "Aprendizaje" y "expropiacin del conocimiento
Merece la pena detenerse en esta nocin de apren- obrero" .
dizaje puesto que en ella y en la medida en que se lle-
gue a dominar y a mejorar, se juega sin duda, no slo No olvidemos que lo que se "registra" -en este caso
..., uno de los puntos clave de la robotizacin industrial, y en general en todas las industrias de serie- consiste
l'.
sino tambin la serie ms importante de consecuencias en una "trayectoria" compuesta de una. serie de gestos
en lo que atae el trabajo obrero. productivos o modos operatorios que ponen en accin
"El aprendizaje" est relacionado con la programa- una o varias herramientas. Lo particular de este mto-
cin de los robots o de los autmatas. Forma parte de do de programacin por "aprendizaje" estriba en que
una de sus tcnicas particulares. Desde este punto de permite economizar todo el anlisis de los tiempos y
50 51
;: . .
. ' \
de los movimientos propios a la OCT (Organizacin la MHMN se procede por medio de la descripcin uno
Cientfica del Trabajo) clsico, convirtindola en cier- a uno, de los movimientos que componen la trayecto- .,
to modo en caduca. El robot que funciona por apren- ria. Esto por medio de un lenguaje abstracto y espe- ,..\
dizaje se convierte as en una nueva y poderosa palan- cializado (que puede ser simplificado como se ha visto,
ca para la expropiacin de los modos operatorios y si ellogicial es muy desarrollado).
del conocimiento obrero, ante los cuales, las tcnicas En el caso del robot, se procede por ''registro, glo-
de anlisis de los tiempos y de los movimientos naci- bal de la secuencia operatoria siendo las trayectorias
dos del taylorismo no haban podido ser utilizadas efectuadas por "el mueco" reproducidas analgica-
eficazmente (*). El robot "incauta" y se "apropia" mente por el calculador. La superioridad del segundo
directamente de los modos operatorios obreros sin mtodo aparece aqu netamente pues "la flexibilidad"
que stos (como antao) necesaria y previamente sean de programacin del robot es incomparablemente
reducidos a gestos y a tiempos elementales. El robot mayor. i ;
incauta "en bloque" por "secuencias enteras" el con-
junto del conocimiento obrero para volver a restituir-
lo tal cual. No es necesario hacer hincapi sobre la 3. Registro "en continuo" y registro "punto por
gran importancia que puede revestir esta prctica en punto"
caso de extenderse a gran escala en el taller.
.~ ', ' En el caso del robot pintor mencionado ma:; arriba,
el registro se efecta cada 20 milsimas de segundo, es
~' ' .. 2. "Registro" y "descripcin, de las trayectorias "-'' decir, se hace prcticamente de manera ininterrumpida.
;.:.
('
} En otras situaciones, cuando se trata de ciclos de tra-
El mtodo "por aprendizaje" expuesto anterior- bajo donde slo un nmero limitado de posiciones es
mente permite poner en evidencia claramente la dife- imperativo: caso de la soldadura (robot horizontal SO
rencia entre un robot y una MHMN, en lo relativo a por ejemplo) se procede al registro de manera un tan-
los mtodos de programacin. Si en los dos casos (ro- to diferente. Por medio de un "sintaxor" (especie de
bot y MHMN) se trata, en principio, de memorizar palanca de mando con 6 grados de libertad) manejado
trayectorias (con o sin cambio de herramientas o pie- por un operador y teniendo en cuenta las coerciones
zas, sobre uno o varios ejes), esta "memorizacin" se de las trayectorias o de las posiciones, slo se registran
obtiene mediante dos tcnicas distintas. En el caso de en las memorias de los calculadores los puntos obliga-
. ': dos de la trayectoria. El efectuador, en el caso de la
(*). Sobre el papelcentral jugado desde el Scientific Management de F. soldadura, (provisto de pinzas para soldar) restituye
W. Taylor (1906), por las tcnicas de expropiacin del conocimiento acto seguido una trayectoria ptima que incluye estos
obrero para asegurar -con el dominio por el trabajo obrero- el desarro-
llo de la produccin industrial de masa en las industrias de serie, cf. puntos obligados.
nuestro trabajo (15), 1982. De aplicacin en sectores muy variados, desde la
52 53
mecan~zacin al montaje, desde la forja al ensamblaje,
estos tipos de robots estn llamados a jugar un papel
considerable en la disposicin de los recorridos de
produccin, la jerarqua de las cualificaciones, y la re-
lacin de fuerzas en el seno del taller. En todos los ca-
sos sealan las posibilidades radicalmente nuevas abier-
tar en las industrias de serie por los recientes progresos SEGUNDA PARTE
de la microelectrnica.
56 57
del z'ndice de progresin. Si tomamos el ao 1970 co-
mo punto de referencia vemos que la poblacin de ro-
bots instalados se ha multiplicado por ms de trece en
OOOt"l0-00 dir.z aos. En valor, el ndice de crecimiento anual
- OOOt"lO!"-Ot"l
OtnN-~r"lN-
\C)ty)_:_: previsto para el perodo 1980-1985 vara entre el 1O
y el 20 por ciento para el Japn, entre el 15 y el 26
por ciento para Europa (pero solamente entre el 8 y
o el 11 por ciento para Francia) y del 26 al 38 por cien-
o to para los EE.UU.; estos porcentajes de crecimiento
o se mantendran estables en el perodo 1985 a 1990
o (cf. (14) y (28).
q 8
o
N
oO Los datos publicados por el JIRA muestran nica-
mente para el ao 1979-1980 la gran vitalidad del
o
mercado en el Japn. Segn los tipos de aplicacin, el
- 800
o
o
.,..
o
porcentaje de progresin anual vara del 60 por ciento
para los robots de prensa al 340 por ciento para los
robots de ensamblaje. A partir de 1980, esta progresin
rri ha continuado; a pesar de la disminucin de la activi-
dad econmica global y siendo los robots fuertemente
tributarios de ella pues forman parte de los bienes de
-o equipo, la progresin del volumen de negocios del sec-
...o o
-N
tor ha sido, en 1982, del 40 por ciento (28).
fa, nm. 28).
punto. Los datos disponibles en la actualidad muestran
claramente un ritmo de desarrollo muy desigual de la
robtica, segn los pases. Y esto, en particular, si ra-
:.S zonamos desde el punto de vista de los constntctores
~
=
Q) ~
. -o "' .
y de los pases fabricantes de robots. El Japn y los
.. ....
g s-o ! EE.UU ocupan una posicin hiperdominante .
.
. o .. o-."'l
o;.:: o.
= =
. -o ~ .S "' -o
"' "'ij
.... .
= ..
!!1
e ::>a~-o
::>a~d
t::-. .....
.... <:!_oo
!!1
=
!U !U:; .s e
'0>-'0;;.v
C.l.Li ::s ~ ~
..
i_ ..,...,!/.l_
....
";
111 c.a~rn<:!
0 orn-
...
~
o ::S
;; '>
'
2. Una difusin fuertemente jerarquizada
~~JJ<.::~,.fl.~o~rf2 El cuadro establecido por Joel Le Qument (1981)
59
~. ,
.., . .: ;!...
". ~
' . -~- ,.
. ~~ \:. : ;.1\f~'f\,1
. , . .~~)r . ...'.:;,.~.~-~. :;m
l:t:r;.
.. (;',;u
~~. ~
..
!::.
Q
.ll-lJ.Sa~ e ~ >- :e vamente en el mercado de la robtica, trayendo una
,.' .
~
:g redistribucin de la relacin de fuerzas entre construc-
'U O ~-E, , ,g
~ tores. A partir de ahora se manifiesta una cierta diver-
>. "
~= ~~ j
o
li~
g e:
e:: Q)
"g : .
-e1
g.!l
"'
j s~ficacin aunque, principalmente, el mercado perma-
~~& ~ ~g .... 8
S::=~
8 ~ ..
"" ~o.; ~ ,.,
~-8
~
o ,.. .!l 8 nezca en manos de las firmas americanas. Dos empre-
'0~1!
S:s& a::a oo= E) =~ ]~ 3 sas juegan un papel primordial: Unimation y Cincinnati
"'O
-o "
e-~ .8~~' "'"
-~ ..,
"'"' =<
:::::!~ Clltf.J ..
~-5 .g~a"'
' . oc."' ~""-~
:~ ~ 11 ;,~t:j -~ ~ h
Ji!,~
~& ~:
Milacron.
. ,>; Durante mucho tiempo, Unimation ha sido el lder
(
~-~ ~ 1 1 1 [h 1 1 1
mundial incontestable. En la actualidad experimenta
'
un ligero decrecimiento, pero su reciente y espectacu-
:}'t, lar compra por el gigante de la electrnica Westinghou-
(, 61
se, presagia, sin duda, una fuerte redistribucin de los cinnati participa, como parte nica en lo relativo a
papeles en el conjunto del sector. Unimation se abri robtica, en un gran programa nacional aeronutico
paso esencialmente en los aos 60 a partir de un robot (el programa ICAM) que adems de Cincinnati y unas
de ensamblaje, el PUMA (programmable Universal empresas de logicial, engloba a todos los grandes de
Manipulator of Assembly). El PUMA, de dimensiones los sectores civiles y militares (Boeing, Douglas,
reducidas, muy fcilmente reprogramable (en tiempo Lockeed, General Dynamics).
real) est particularmente adaptado para la manipula- En los ltimos aos, el mercado americano de ro-
cin de cargas ligeras (inferiores a 7 kgs.) y logra una bots se ha diversificado. Las empresas pequeas y me-
gran precisin. La empresa automovilstica General dianas parecen estar llamadas, en consecuencia, a un
Motors, una parte de cuyas fabricaciones ha tenido desarrollo importante. Es el caso especialmente de
que ser repensada para aprovechar al mximo lo me- Automatix. Entre las firmas extranjeras establecidas
jor del PUMA, ha contribuido considerablemente a en territorio americano, la firma sueca ASEA juega un
su puesta a punto y a su difusin. Aparte del PUMA, papel importante as como la filial americana de la
la firma propone una gama diversificada de manipula- noruega Tralfa (especializada en el robot soldador).
dores (los Unimate ... ) adaptados a funciones especiali- La japonesa Fanuc, gracias a un acuerdo firmado con
zadas cada vez ms numerosas. General Motors, debera ocupar una posicin estrat-
El otro "grande" de la robtica americana es Cinci- gica. Para terminar, hay que destacar la presencia de
nnati Milacron. Su llegada al mercado es posterior a la Cybotech en la cual Renault posee el 49 por ciento
la de Unimation, pero sus bazas eran, de entrada, con- de las acciones.
siderables puesto que Cincinnati es el primer cons-
tructor americano de mquinas-herramienta y dispone 2. La concepcin y la fabricacin de los robots ha
' :l
por eso de una importante "base-estratgica". Su . '' pasado de los EE.UU. al Japn, muy pronto, puesto
irrupcin en el mercado se ha llevado a cabo mediante que de 1968 a 197 5 se firmaron unos acuerdos de im-
robots de alta calidad con dos modelos de base, cuya portancia estratgica entre los cuales sobresale el
precisin y fiabilidad han garantizado su rpida pene- acuerdo Unimation-Kawasaki as como el de Daido
tracin en la industria automovilstica (en particular Steel y AMF. Otro acuerdo de suma importancia para
Ford y General Motors), en mbitos de aplicacin que el lanzamiento de la robtica japonesa, fue el de Kobe
van desde la fmja hasta las fundiciones y a la soldadura Steel y la firma noruega Tralfa, una de las ms grandes
(soldadura de punto y ms sofisticada, soldadura "al de la soldadura a nivel mundial. Se ha asegurado de
arco"). Esta firma quiere establecerse en el futuro en esa manera la transmisin inicial de las tcnicas de base
la aeronutica. Sus robots combinados con sus MHMN hacia el Japn. Hasta tal punto que este pas se ha
. 1
(para las cuales existen ya tcnicas de programacin convertido a la vez en el primer constructor y en el
simultnea) deberan encontrar ah un campo de apli- primer utilizador. Su importancia es tal que el "caso
cacin privilegiado. Y esto tanto ms cuanto que Cin- japons" ser objeto de un estudio aparte (Cap. JI).
62 63
r\'r' ' ~~' ' ';i >
':
Este fuerte incremento de poder del Japn no ha abo- gocios del grupo. Merece la pena tener en cuenta este
lido, sin embargo, su cooperacin con los EE.UU. Por hecho porque corresponde a la estructura de activida-
el contrario, todava en la actualidad se multiplican des de los constructores de robots japoneses. El dina-
los acuerdos de todo tipo (simple comercializacin, mismo de ASEA es impresionante. Una doble toma
pero tambin acuerdos de licencias y de investigacin- de participacin en ESAB-AB (soldadura al arco) y
desarrollo) entre firmas americanas y japonesas, sobre todo en Electroluc-AB le premiten una conside-
acompandose a menudo de un reparto explcito de rable ampliacin de su gama inicial; al tiempo que se
., las zonas geogrfica que les interesan y los niveles de extiende su multinacionalizacin. Adems de sus ta-
gama. lleres de montaje en Finslatten (capacidad 900 robots/
Este fenmeno ha adquirido tal amplitud que se ha ao), la firma se ha instalado tambin en Espaa (Bar-
hablado de "un efecto de tenaza" puesto que la canti- celona, capacidad: 250 robots/ao), en los EE.UU.
dad de los acuerdos americano-japoneses deja mrge- (en el Wisconsin con una capacidad de 400robots/ao,
nes muy reducidos a Europa (25), 1983. . en el Estado de New York y en Troy en Michigan).
o; ~..,.._._, 1 , .~ " t, } '., <: ' . ~ ' Por otra parte, existen proyectos en fase de realizacin
~: en el Brasil y en Japn.
3. En Europa la robtica ha entrado tarde y ocupa Segunda observacin: quitando en Europa, dos ex-
(: . . unas posiciones mal aseguradas. Aunque su historia cepciones (ASEA y Olivetti en Italia), las empresas .:i
i .. :: sea muy corta, es posible resaltar algunas de sus carac- del sector automvil son las que han destacado princi- '
1., ,.
tersticas. palmente. Fat en Italia mediante Camau; Volkswagen
Una primera observacin consiste en establecer una en la RF A que ha producido -sin llegar a comerciali- ';J
diferencia entre firmas y pases, segn la fecha de su zarlos- sus propios robots; Renault en Francia prin-
entrada en el mercado. Hay que distinguir el grupo de cipalmente a travs de su filial ACMA Renault. La
los primeros llegados (esencialmente Suecia y la RFA) etapa actual est marcada, sin embargo, por la entrada
del grupo de los pases que no se han establecido en el en el sector de los grandes grupos de la electrnica, de
mercado hasta mediados de los aos 70, de hecho, la infonntica y de los bienes de equipo: Thomson y
despus de la crisis de 1974-75 (Italia, Gran Bretaq, Matra en Francia; DEA en Italia; Kuka en la RFA;
Francia). Un tercer grupo que comprende, sobre todo, GEC en Gran Bretaa. En esto los europeos no hacen
Blgica y Espaa se forma en el umbral de los aos 80. ms que seguir los pasos de los japoneses y de los
Entre los primeros llegados el grupo sueco, ASEA americanos. En los EE.UU. este fenmeno es particu-
ocupa un lugar aparte. La robtica es slo una de las lannente espectacular ya que IBM, Westinghouse y
actividades de este grupo, deliberadamente orientado General Electric slo ahora han efectuado su entrada
hacia la alta tecnologa (energa elctrica, incluyendo en la produccin de robots.
la electronuclear y los bienes de equipo). En 1982, la Para concluir, y atenindonos a la robtica propia-
robtica representa el _1 por ciento del volmen de ne- mente dicha, exceptuando el grupo sueco ASEA (y
64 65
,r.';.
-'
66 .67
' :.
f ::: ~ ' '
:J., . .. ilMI
. ' ~~
'.
~
otro, el "consenso social". A menudo estas dos claves matizacin sencilla y robusta. No obstante, la progre-
se asocian y se confunden en una misma explicacin. sin de los materiales de alta calidad es rpida.
En el captulo anterior, hemos tenido ocasin de Si situamos estas cifras en una amplia perspectiva
relativizar este punto de vista. De manera especial, (los aos 70). observamos que el crecimiento del
recalcando que los EE.UU., que jugaron un papel de parque de robots aparece con gran vigor. Se estima
pioneros en materia de automatizacin, tambin po- que cada cinco aos aproximadamente se duplica el
seen una industria inmensamente poderosa. parque.
El indiscutible nivel tcnico alcanzado por Japn se Si examinamos la distribucin de los robots insta-
explica necesariamente por fenmenos mucho ms lados por sectores de actividad, veremos que a pesar
complejos que los que se nos vienen repitiendo profu- de que la industria del automvil es, por mucho, el
samente; aun siendo verdad que en Japn se ha pro- mayor consumidor de robots (38 por ciento de su tota-
ducido un poderoso movimiento de electronizacin lidad en 1979), stos se extienden y penetran en todas
de la produccin, sta se compone de un conjunto de las grandes ramas de la industria: 18 por ciento en la
factores difciles de desenmaraar. Antes de intentar construccin elctrica; 11 por ciento en las industrias
hacerlo, hemos de levantar acta de la asombrosa vita- del plstico; 8 por ciento en la metalurgia;4por ciento
lidad del mercado de la robtica en Japn. en la siderurgia; 21 por ciento en los dems sectores.
En cuanto a los constructores de robots, existe un
aspecto que diferencia netamente al Japn de los EE.
VV. Contrariamente a lo que sucede en los EE.UU.,
l. Los automatistas en la dcada de los 70 en Japn donde, como hemos visto, la oferta est ampliamente
dominada por dos grandes grupos (Unimation y Cinci-
Aunque se subestimen de manera excesiva las cifras nnati), en Japn la industria de los robots est poco
corrientemente barajadas, la difusin de los automa- concentrada. En 1978, los cinco primeros constructo-
tistas en Japn es espectacular. Para intentar aproxi- res slo abastecan el 29 por ciento del mercado _y los
marse a los datos ms fidedignos, es conveniente refe- 16 primeros, el 43 por ciento. Siguiendo en el ao
rirse al principio de clasificacin adoptado por el JIRA. 197 8, la clasificacin era la siguiente: Kawasaki 15
Los manipuladores rgidos, que corresponden a un por ciento; Toshiba-Seiki 5,5 por ciento; AIDE Enge-
nivel tecnolgico elemental (81), son en volumen, los neering 5,2 por ciento; Star-Seiki 5,5 por ciento;
ms numerosos (13.438 robots, es decir el 67 por Hitachi 4,7 por ciento; Mitsubishi 4 por ciento; Yas-
! .
ciento del parque total en 1980). Los materiales ms kawa 3,7 por ciento. En 1980, existan aproJQ.mada-
,.'' sofisticados (las categoras C+ D +E) slo representan, mente 13 5 constructores, de los cuales unos 40 no
en volumen, el16 por ciento del total. comercializaban sus productos pues los utilizaban pa-
Como anotaba ya F. Gze (21) parece ser que, en ra sus propias necesidades. Otro punto interesante a
la fase inicial, ha prevalecido la eleccin de una auto- destacar es que no se considera rentable al sector en
68 69
su conjunto. Exceptuando cuatro o cinco, los cons- dustria cuyas ramificaciones,Je mecnica, de electrici-
tructores japoneses no se mantienen ms que por dos dad y de electrnica, se han beneficiado rpidamente
razones. Por una parte, el Departamento robtica de una atencin -y de una proteccin- particulares.
constituye, salvo alguna excepcin, una ntima parte En la unin de las tres remificaciones, la industria de
del volumen de negocios de las empresas que los pro- los bienes de equipo se ha desarrollado y fortalecido
ducen (las prdidas se compensan por los beneficios de manera espectacular. Ha constituido siempre un
de las otras actividades); por otra parte, va el podero- sector explcitamente privilegiado de la poltica
ssimo MITI (Ministerio de la Industria, del Comercio japonesa.
Exterior y de la Tecnologa) y el JIRA (Japan Indus- La oferta de los bienes de equipo automatizados
trial Robotics Association), unos programas acabados se ha desarrollado, adems, y quizs en esto reside lo
aseguran, por medio de subvenciones y de mercados esencial, en un contexto social estructuralmente favo-
garantizados, el crecimiento de un sector considerado rable a la automatizacin. Diversas particularidades
como esencial en el futuro. fundamentales del Japn moderno han combinado
sus efectos para abrir a la automatizacin ese espacio
que ha convertido al pas en el mercado nmero uno
2. Sobre las condiciones sociales estructurales de la robtica. Si la voluntad de mejorar la calidad y
favorables a la automatizacin(*). la bsqueda de una flexibilidad cada vez mayor son
las principales causas de la expansin de la robtia.'en
Diversas series de factores concurren en la explica- las empresas japonesas, hay que dar toda su importan-
cin de la importancia que la robtica (en un principio cia al papel que juega la situacin del mercado del tra-
producto importado) ha revestido en Japn. Algunas bajo encuadrada en el sistema de empleo japons:
son debidas a la estrategia de industrializacin que se - la escasez de obreros cualificados es una constan-
ha seguido. Otras responden ms bien a las caracters- te del mercado del trabajo japons desde los 60. Este
ticas del sistema social y de las relaciones sociales del problema, duramente acusado por las pequeas y me-
trabajo que prevalecen en ese pas. dianas empresas, ha favorecido, probablemente , la
Japn es un pas desprovisto de materias primas, automatizacin en este tipo de empresas;
pero muy poblado, y que se beneficia de una localiza- - la elevacin del nivel general de la educacin ha
cin privilegiada en trminos de mercado. Desde la reducido la oferta de jvenes que salen en el primer
posguerra, Japn se ha lanzado a una poltica sistem- ciclo de la educacin, que es el nivel en que las empre-
tica de construccin y de fortalecimiento de una in- sas reclutaban su mano de obra. Los que han seguido
estudios ms largos, despreciando los trabajos duros y
(*). Este punto y el siguiente recogen extensamente los argumentos peligrosos, se han inclinado, hasta que ha sido posible,
expuestos en el artculo redactado conjuntamente con Y. Lacler (cf. por el sector terciario o los empleos de gestin;
Coriat -L~cler
(16). Quisiera aqu mostrarle mi agradccimien to , al tiempo
que le ex1mo de toda responsabilidad . el envejecimiento rpido de la poblacin, en un
70 71
sisttaua que privilegia deliberadamente a ios jvenes,
mano de obra ms barata, igualmente ha incitado a por lo menos) graves trastornos o fenmenos de
economizar el trabajo vivo; rechazo.
- la pertenencia a una empresa, ms que a un gre- No obstante, las mutaciones internas han sido a
mio, la garanta del empleo para los asalariados q~e se menudo importantes, de una empresa a otra o de un
benefician del empleo de porvida (aprox. 30 por c1e.nto puesto a otro. As por ejemplo , en lo que se refiere
de los asalariados japoneses) y una nocin de cualifi- a la introduccin de los simples robots industriales,
cacin orientada hacia la polivalencia, facilitan la mo- una encuesta llevada a cabo por la Secretara de Es-
vilidad interna y, por ende, las reestructuraciones que do a las pequeas y medias empresas, en 1981 , mues-
van unidas a los cambios tecnolgicos; tra cmo el reciclaje y el traslado de puesto son una
- por ltimo, aunque la estructura sindical organi- solucin corrientemente utilizada en. el Japn para
zada por empresas no signifique una "integracin" "adaptar" la mano de obra: en el 24,7 por ciento de
completa a los objetivos de la firma, ha contribuido, las empresas interrogadas, toda la mano de obra obre-
sin embargo, a una concienciacin tarda sobre los ra ha sido reciclada, mientras que en el65,7 por ciento
efectos negativos de la robtica sobre el empleo. Ade- de las empresas, han tenido lugar, a la vez, reciclajes y
ms, el sindicato de empresa slo agrupa a los trabaja- traslados de puesto . El 93,5 por ciento de esos trasla-
dores regulares, mientras que los de "contratas", los dos son dirigidos hacia otros procesos de produccin
temporeros y las mujeres (categoras que, sumadas, industrial ; los traslados hacia tareas de gestin son
componen principalmente la poblacin asalariada) pues muy raros (*).
son los primeros candidatos a las eventuales reduccio-
nes de plantilla.
Todos estos elementos, a los cuales hay que aadir 3. Existen lmites?
el hecho, a menudo puesto en evidencia, de un con-
junto de relaciones particulares entre la gran y la pe- El optimismo que prevaleca en los medios indus-
quea industria (*), han hecho posible una regula- triales japoneses ha dado paso a la inquietud. Sin du-
cin del conjunto industrial que, hasta hoy, ha per- da alguna, la automatizacin y la robotizacin estn
mitido la automatizacin y la modernizacin de la llamadas a desarrollarse y todos los clculos apuntan
industria japonesa sin provocar (de manera visible a que los ndices de progresin no decaern en los
prximos aos. Pero las recientes encuestas demues-
tran un cambio de actitud en los industriales japone-
(*). Sobre este punto, como en general, para una reflex_in sobre el caso ses. Aparecen signos que oscurecen con mayor o me-
japons que se aparte de las mitologas en boga, (cf: Ge~; (21) . nor intensidad el porvenir.
lg1almente, un estudio cuantitativo sobre la robouzac10n en Japon ha
sido elaborado en LELER-GON ENC (23) . Ver asimismo el notable
artculo del TSURU (41) . (*). Datos extrados del estudio de Y. Lecler, en LECLER-GONENC
(23) .
73
La absorcin por el sector servicios de los traba-
jadores que sobran, con la cual contaba el Japn, no
parece hoy constituir una solucin para los trabajado-
res despojados de empleo por la robtica, sobre todo
si el movimiento de informatizacin, como es proba-
ble, se acenta en el sector terciario.
76 77
PENETRACION DE LA ROBOTICA EN FRANCIA Uno. oferta dispersa y dependiente
POR SECTORES
Desde el punto de vista de la oferta, los constructo-
. O(odel parque de robots res franceses estn por el momento confrontados a
una situacin muy difcil. En lo que se refiere a los
Automvil 58 robots, se estima que slo cubren entre la tercera par-
Transformacin metales 9 te y la mitad del mercado. Y esto contando con que
Mecnica 8 esta produccin nacional se realiza a partir de un alto
Industria elctrica 6 porcentaje de importacin de componentes, que si se
Industria electrnica 5 tomara en consideracin, ms alto sera an, el estado
Cermica 5 real de dependencia en que se encuentra el sector.
Caucho 4 Adems, la mquina-herramienta que en la RFA o
Ciclos, motocicletas 2 en Italia, considerando slo los competidores de Fran-
Aero espacial 1 cia, constituye un punto importante de la industria
Transformacin metales 4 nacional, es en Francia un sector totalmente deficita-
rio y muy desarticulado. Los recientes planes sobre
TOTAL 100 mquina-herramienta as como las medidas tomadas
en favor de la robtica, sectores definidos como prio-
ritarios por el actual gobierno, deberan permitir, a
dianas industrias en 1981 ha revelado que el porcenta- plazo fijo, una cierta "clarificacin".
je de empresas que disponen de manipuladores auto- Actualmente, sin embargo, en Francia, la situacin
mticos crece en relacin directa con el tamao de la se caracteriza por una diversidad y una dispersin que
empresa (estimado en nmero de asalariados). Slo el no constituyen elementos favorables si se tiene en
4 por ciento de las empresas de 10-49 asalariados po- cuenta la dimensin muy modesta del mercado francs .
seen manipuladores automticos, contra el8 por ciento
de las empresas de la categora 5 0-99 asalariados, ell2
por ciento de la categora 100-199 asalariados y, por 2. El caso Renault: el polo robtico de la RNUR
fin, el 21 poe ciento de las empresas de 200 a 499 asa-
lariados. En Francia, la Renault, que fue pionera, tiene tam-
bin una dimensin de gigante . Pacientemente y de
forma sistemtica , la Renault ha negociado a partir de
1974 su entrada en la robtica , tanto como utilizador
como constructor.
78 79
Prcticam~nte desde su nacimiento -despus de la
Segunda Guerra Mundial- la Renault se ha interesado mentado un avance pasando a 100 robots por ao.
en la concepcin y en la produccin de bienes de Actualmente, ACMA-Cribier realiza la mitad del volu-
equipo automatizados. As las primeras mquinas men de negocios del grupo RIET. Los robots produci-
transfer construidas en Europa lo han sido por la sec- dos han sido utilizados esencialmente por la propia
cin mquina-herramienta de la RNUR. A partir de Renault, pero ha comenzado a desarrollarse una activi-
una tradicin antigua y ya slida, la RNUR aborda en dad de exportacin hacia los principales pases de la
los aos 70 la entrada de la microelectrnica en la OCDE, a la vez que se propagan en el mercado nacional.
produccin, evolucin que va a modificar considera-
blemente los elementos relativos al automatismo. La Socit Mcanique de Castres (SMC) especiali-
Desde este punto de vista, 1974 es para la Renault zada en la produccin y la comercializacin de los
el ao clave. En efecto, ese ao se cre una direccin autmatas programables. Su volumen de negocio pro-
delegada para los automatismos (que se convirti en gresa rpidamente puesto que el sector de los autma-
la DTAA, Direccin de las Tcnicas Avanzadas en Au- tas programables est destinado a una fuerte expan-
tomatismos) y que marc la entrada de la Renault en sin en los prximos aos. -
la concepcin y la produccin de los materiales mo-
dernos. Por ltimo, es conveniente recordar, y este es un
Desde 1974, la DTAA coopera con la SOFREMO elemento sin duda muy importante para el futuro, la
(Sociedad Francesa de Estudio y de Realizacin de multinacionalizacin de la Renault en el campo de la
Mquinas-herramienta) en materia de concepcin de robtica. En 1980 se cre en lndianapolis, entre la
robots. Progresivamente, mediante la creacin de filia- RIET y una firma americana (la sociedad Ransburg
les, de reestructuracin o de especializacin de activi- Corporation), la Cybotech. Esta empresa fabrica y
dades en el seno de las fbricas del grupo se ha cons- comercializa bajo licencia los robots de ACMA. Por
tituido un verdadero "polo" industrial 'Renault en su lado, Ransburg Corporation es el lder en las acti-
materia de robtica. vidades de pintura electroesttica, est presente en la
Entre las principales unidades que intervienen en la soldadura por punto y la manutencin. En 1980, el
poltica robtica de la RNUR, se ha operado una cier- volumen de negocios de la Cybotech era ya de 80 mi-
ta divisin de tareas y de funciones. Entre las princi- llones de dlares. Su zona comercial incluye toda
pales unidades implicadas, hay que citar: Amrica, el Extremo Oriente y Oceana, es decir, pa-
ses con una fuerte tasa de crecimiento industrial.
ACMA-<::ribier ~filial del grupo RIET) a quien ha Para concluir este punto, aparece claramente que
sido confiada la produccin y la comercializacin de la RNUR ha instalado ya una estructura industrial
los robots "80". Esta firma ha producido 48 robots slida que la coloca a la cabeza de los grupos franceses
entre 1975 y 1979. En 1980yen 1981,sehaexperi- en materia de robtica. Si situamos el grupo Renault
80 81
en la produccin francesa de autmatas programables, En cuanto a la Renault en tanto que consumidor
hay que formular las siguientes observaciones: de bienes de equipo automatizados, se puede ilustrar
sencillamente su dinamismo. De unas cuantas unida-
l . .E1_1 1980, Renault realiz ms del 37 por ciento des en 1977, el nmero de robots ha pasado en 1982
del volumen de negocios global del sector con 50 mi- a ms de 200, el de los autmatas programables a
llones de francos. La importancia creciente de ACMA aproximadamente 1.500 y el de los calculadores in-
en cuanto a robots se refiere y de la SMC en cuanto a dustriales a cerca de 300. En todos los casos, el avance
autmatas programables, debera permitirle mejorar es espectacular. Todo apunta a su continuidad, de for-
todava ms en los aos venideros esa posicin relativa. ma regular, a medio plazo . Se prev un ritmo de creci-
miento del 20 por ciento por ao, es decir, una dupli-
2. Su implantacin en el mercado francs es fuerte cacin del parque cada cuatro aos. A este respecto,
(segn las estimaciones se evala entre el 20 y el 30 M. Blanc (4) observa:
por ciento), aunque, sin embargo, ello represente un a) Que los talleres a los que se aplica siguen siendo
punto dbil: el mismo grupo Renault es quien por principalmente los de mecanizado y los de chapa,
medio de sus filiales, absorbe esencialmente sus pro- aunque puedan aparecer los automatismos en el en-
ductos. samblaje fmal en el horizonte de 1986.
b) Los materiales con mejores cualidades estn con-
3. Si nos ceimos a un anlisis ms pormenorizado centrados en las nuevas implantaciones o en los talleres
de los tipos de materiales , resulta evidente que son los preexistentes donde se producen los nuevos modelos.
de "alta calidad" los que han proporcionado a la Re- En este caso, se asiste a verdaderos "saltos tecnolgi-
nault su xito ms significativo, sobre todo por medio cos".
de su filial ACMA que produce y comercializa "los ro- e) En cuanto al parque de automatismos, hay que
bots universales tipo 80". prever en el futuro una dbil variacin de las CNC, un
crecimiento medio de los robots y un crecimiento
4. Estos xitos de la Renault pueden ser relativiza- fuerte de los autmatas programables.
dos si se comparan con los de los constructores inter-
nacionales. Aparece pues netamente que si la Renault En unos pocos aos, la Renault se ha impuesto no
se clasifica lejos, detrs de los grandes constructores slo como el ms slido polo francs en materia de
mundiales especializados en la produccin de robots, robotizacin sino tambin como punto de referencia
ocupa no obstante, una posicin aceptable si se com- obligado para toda futura poltica de desarrollo de la
para con sus competidores europeos, exceptuando robtica francesa.
ASEA.
82 83
TERCERA PARTE
NUEVAS FORMAS
DE AUTOMATIZACION
88 89
enormes progresos en cuanto a rendimient o de trabajo refieren al equilibrado de los puestos de trabajo en los
humano se refiere. recorridos de produccin (*).
Todo esto se traduce por un doble consumo de
tiempos improducti vos, puesto que: a) una parte de
2. Los lmites de la Organizacin Cientfica del Trabajo los "tiempos muertos" suprimidos en primera instancia
de la produccin gracias al sistema de conduccin Y
A mediados de los aos 60 y por la presin sobre de traccin, reapararece por otro lado (espacio de
todo de las luchas obreras, que contestaba n cada vez tiempo en que el producto circula sobre esos conduc-
ms abierta y eficazmente el tipo de organizacin de tores y esos tractores sin ser objeto de trabajo). b) los
la produccin resultante de la aplicacin de aqullos, productos "en fase de transforma cin" terminan a
stos fueron objeto de un reexamen de conjunto hasta menudo por significar un importante coste por alma-
por aquellos mismos ingenieros que los haban aplicado cenamiento forzado e involuntari o (cf. Emery (18).
e impuesto en la industria. Ha sido necesario admitir As, los ingenieros admiten actualment e que la or-
progresivamente que en el mismo corazn del sistema ganizacin de la produccin en "lneas'' de puestos
existan contradicci ones que, al desarrollarse, consti- encadenados, que constituye la respuesta clsica dada
tuan una amenaza seria para su eficacia. por la OCT, presenta serias "dificultad es". En efecto:
Se observa que, los progresos, palpables, obtenidos - por una parte, la "carga de trabajo" sobre cada
en la intensidad del trabajo, lo haban sido apoyndos e, uno de los puestos es muy desigual. Y puesto que el
sobre todo, en una mayor eficacia de los ritmos indi- transportad or pasa a un ritmo uniforme, esto se traduce
viduales de trabajo, lograda por medio de dispositivos por el hecho de que se considere a ciertos trabajadore s
de "economa " general del tiempo de produccin ; como sub-aprovechados, y otros, por el contrario,
ritmos que, considerados en su conjunto, comprende n . como "sobre-carg ados"; la velocidad de paso es dema-
una mayor cantidad de tiempos muertos susceptibles siado rpida como para permitir a los obreros de esos
de ser analizados tambin como prdida de eficacia puestos efectuar los gestos que les son impuestos. De
del sistema. Los mtodos habitualme nte utilizados en lo cual resultan puntos de condensaci n de tensiones
materia de gestin del tiempo global de produccin
-lo que se denomina en las oficinas de mtodos, pro-
cedimiento s de equilibrado de los puestos de trabajo (*). Fruto de las tcnicas taylorianas y fordianas, el equilibrado se ~n
y de los recorridos de producci n- chocan con dos cuentra en la encrucijada de dos series de problemas -los que concier-
series de contradicci ones por lo menos: las que se re- nen a la gestil>i1 de los puestos de trabajo para asegurar el mejor rendi-
miento posible de conjunto de los trabajadores, teniendo e~ cuenta la
fieren a la ineluctavilidad de las prdidas de eficacia desigualdad de la duracin de los diferentes ciclos operatonos en ca_da
de los mtodos del MTM (medida del tiempo y de los puesto; -los que conciernen la gestin de los stocks Y de los fluos
movimientos) en lo que concierne los tiempos de re- (materias primas, piezas y componentes elemental~s) desde los almace-
nes a los recorridos de mecanizado y de ensamblaJe (sobre este punto,
corrido de la pieza y, ms importante s an, los que se cf. nuestro trabajo (15),1982.
90 91
en las cadenas que representan otros tantos puntos de Recientemente, un ingeniero de Cincinnati-Milacron,
conflicto potencial. tratando de los intervalos donde desarrollar la automa-
-por otra parte, toda esta organizacin es de insta- tizacin de la produccin, afirmaba: "Se ha demostra-
lacin muy pesada y es difcil de modificar. Ahora do, al efectuar el anlisis de la vida de una pieza mec-
bien, las condiciones actuales de la competencia entre nica media en los talleres de mecanizado de metales
firmas y los azares que caracterizan el comportamiento en series peque.as, que la pieza ha pasado tan slo un
de los consumidores, hacen que la demanda vare a 5 por ciento de su tiempo en las mquinas-herramienta
menudo rpida y brutalmente, a la vez en cantidad y y que sobre este 5 por ciento, slo el 30 por ciento
en calidad. Existen, por ejemplo, ms de lOO variantes representa el tiempo productivo pasado, efectivamen-
de un mismo modelo base de automvil: segn las te en el mecanizado". Esta situacin "muestra clara-
cules son los dos campos principales donde se
mente
opciones, las normas para exportacin, etc ... La cade-
na aparece as como un instrumento extremadamente pueden aportar mejoras importantes. La primera es la
rgido cuando el estado del mercado exige de los reco- reduccin del tiempo de paso por el taller: se constata
rridos de produccin una flexibilidad para que la fa- que el stock (piezas inacabadas, en espera o en fase de
bricacin pueda responder rpidamente a las fluctua- fabricacin) puede ser reducido en un 90 por ciento.
ciones de la demanda y adaptarse a los caprichos del El segundo sector que se presta a grandes mejoras es
mercado. el del (ndice de utilizacin de las mquinas. Esta utili-
Todas estas razones hacen que actualmente las tc- zacin podra aumentarse en un 600 por ciento o
nicas clsicas de la OCT no aparezcan ya como la so- ms". (citado en (22).
lucin mejor adaptada a la organizacin de la fabrica- Semejantes ~stimaciones, por muy tericas que sean,
cin. hacen so.ar. Suponiendo que nicamente se realicen
de manera parcial, los beneficios potenciales que per-
mite la robtica son enormes. El robot, tomando el
3. Unas considerables mejoras potenciales de relevo o sustituyendo al cronmetro, puede jugar as
productividad. un papel importante en la reduccin de los tiempos
improductivos en el taller.
Ya en 197 5, el socilogo Emery, resumiendo las Si a esta dimensin, casi tecnolgica del anlisis,
investigaciones americanas, deca: "El alcance prctico a.adimos el conjunto de sobrecostos que provienen
del problema del equilibrado puede estimarse a partir de la resistencia obrera al trabajo en cadena en todos
de los resultados de las investigaciones efectuadas en los grandes pases capitalistas desarrollados, desde hace
la industria del automvil en los EE.UU.: 25 por cien- por lo menos 15 a.os (absentismo, rotacin de mano
to del tiempo de los trabajadores en la cadena de de obra, "sabotajes", huelgas y conflictos), se com-
montaje se ha perdido por el hecho de la desigualdad prender mejor an que el espacio abierto a la auto-
en las cargas de trabajo. (El subrayado es nuestro). matizacin del taller, potencialmente al menos, es
92 93
considerable. La robtica est empeada en la con-
quista de esas potenciales mejoras de productividad.
De esa manera se convierte en una de las respuestas
desarrolladas por las empresas a la doble crisis de efi-
cacia tcnica y social de la OCT. Sin embargo, noto-
dos los objetivos tericos fijados pueden ser alcanza-
dos. Por el momento, se puede considerar que la nueva
automatizacin, basada en el empleo de la robtica y
de la electrnica en la produccin, est centrada en
dos grandes objetivos:
- intentar obtener un (ndice de productividad ma- Una nueva economa
yor de las mquinas y de los hombres reduciendo los
tiempos muertos y los tiempos improductivos de cir- del tiempo
culacin. Se trata, as, de convertir en ms "densa" y
ms "compacta" la produccin "integrando" mejor
las diferentes secuencias productivas;
- el segundo objetivo general es el de intentar
aportar agilidad y flexibilidad a la rigidez de los reco-
rridos de produccin, rigidez que, en las condiciones
actuales del mercado, llega a ser una pesada carga.
94 95
ms difciles de alcanzar, son entonces mucho mayo- sus lmites, este medio de automatizacin (por susti-
res. tucin) obliga a formular las siguientes observaciones:
96 97
- respetar unas normas de produccin rigurosas exigi- Si por las necesidades del anlisis examinamos la
das por la standarizacin estricta de ciertos compo- automatizacin de sustitucin, veremos que slo ad-
nentes elementales. Principalmente en la aeronutica, quiere su entero significado cuando viene acompaada
gran consumidora de MHMN para el mecanizado de de otra manera y de otras condiciones en el uso de los
autmatas, y que tienen por objetivo una mejor "inte-
piezas, es sta la meta . perseguida. Se admite as, en
gra~in" espacial y temporal de las secuencias de ope-
general, que la MHMN est particularmente adaptada
raciones.
para la produccin de piezas complejas en pequeas
series;
- concebir materiales capaces de actuar en zonas de
2. La fabricacin asistida por calculadoras o la
actividad inaccesible (caso de los manipuladores en
los reactores nucleares), o peligrosas para el hombre, automatizacin de integracin
(la forja, por ejemplo, en las industrias mecnicas),
actividades generadoras de costos indirectos muy . La puesta en marcha de medios de trabajo que per-
importantes. miten modificar la distribucin de los diferentes flujos
productivos en el seno del taller (flujo de energa de
e) Ms generalmente, y aunque no se trate ms que
materia, de piezas, de herramientas, de producto; en
de una dimensin "prospectiva" y exploratoria de las curso de fabricacin), en vistas a limitar los "tiempos
cosas, las posibilidades que abre la automatizacin pa- muertos" y los tiempos juzgados como improductivos,
ra liberarse en cierta medida de las coerciones propias depende de la automatizacin de integracin. El obje-
al conjunto de "gestos" de produccin asentado sobre tivo consiste entonces en obtener un mayor ndice de
las tcnicas de la OCT -y sobre la utilizacin del ~pr?vechamiento de los hombres y eJe las' mquinas,
cuerpo humano- no deben ser ignoradas. As, las limitando al mismo tiempo los "stocks" que constitu-
coerciones de "postura" y de "simultaneidad" en la yen la circulacin de las materias primas, lo que se de-
ejecucin de las operaciones -limitadas en el hombre nomina tambin los "en curso".
que slo tiene dos brazos y no puede trabajar durante En la prctica, este resultado se obtiene gracias a
largo tiempo en ciertas "posturas"- no plantean, en una nueva distribucin y a un reparto general de los
principio, ningn problema a los medios mecnicos de medios de circulacin, de alimentacin, de manuten-
trabajo. Al final, pueden resultar formas de "sustitu- cin Y de posicionamiento (transportadores tractores
. '
mstrumentos de traccin-levantamiento, etc ... ). Una
'
cin que no sea la simple reproduccin de gestos pro-
ductivos catalogados por la OCT. Una nueva arquitec- gran parte de los medios de trabajo utilizados a este
tura de los puestos de trabajo -y de las relaciones en- fin son muy antiguos y algunos son contemporneos
tre ellos- es as potencialmente creada por la automa- de la cadena de montaje de Ford. Adems, una parte
tizacin de sustitucin, lo que podra dar origen a a menudo importante de estas tareas de alimentacin
nuevos progresos en la productividad del trabajo . de traslado y de puesta en posicin no puede ser auto~
matizada con eficacia y contina siendo efectuada
98
99
manualmente incluso hasta en las instalaciones que
tienen fama de ser las ms automatizadas. Se d as En el primer nivel, se trata nicamente de multi-
el carcter "heteroclito" de los recorridos de produc- plicar el nmero y la eficacia de las transmisiones y de
cin donde robots, hombres y autmatas coexisten los rels entre mquinas separadas. Desde hace mucho
en un mismo segmento. El punto importante est en tiempo tales tipos de rels -de base electromecnica-
el hecho de que la economa, al proporcionar nuevos estn presentes en los talleres donde aseguran _el80 por
medios de tratamiento y de clculo, permite una me- ciento de los traslados automatizados... La novedad
jor "gestin" de todo o parte de esos flujos. introducida por la electrnica consiste en que posibili-
Insistiremos aqu tanto sobre los robots como sobre ta una mejor gestin "de los flujos cautivos" en el seno
el papel que juegan las calculadoras. En la mayora de de una "red" determinada de puntos y de mquinas-
los casos, especialmente cuando se trata de automati- herramienta separadas (con o sin mando numrico).
zar un conjunto coordinado de recorridos y de mani- Se puede obtener este tipo de automatizacin califica-
pulaciones, los automatismos y las calculadoras a los do a veces de "intersticial" por medio de autmatas y
cuales estn conectados constituyen la condicin sine de manipuladores de concepcin relativamente simple.
qua non de la automatizacin. Estos, conectados a las Este es por excelencia, el campo de aplicacin privile-
mquinas-herramienta por una parte, aseguran el pilo- giado de los procedimientos de "reparto de inteligen-
taje tanto de la puesta en marcha de las herramientas cia": unos sensores y unos microprocesadores locales,
y de las mquinas como del ritmo de circulacin de las dispuestos en cada punto del "recorrido crtico" com-
piezas y de los materiales que alimentan aquellas puesto por una secuencia de fabricacin, recogen y
herramientas. tratan informaciones locales y proporcionan a los eje-
A fin de cuentas, la verdadera dificultad reside en cutadores (herramientas propiamente dichas) determi-
la coordinacin -que debe ser perfecta-, entre el rit- nadas instrucciones con el fin de obtener una mejor
mo de circulacin de las piezas y materiales y el de la distribucin de los flujos.
accin de las herramientas sobre los materiales. Las De manera general, una calculadora "central" orde-
calculadoras constituyen, en cierto modo, la verdade- na la actividad de los procesadores locales. Esta prc-
ra "inteligencia" de la unidad automatizada. Las cal- tica unida a la "dispersin" de los medios electrnicos
culadoras imprimen el ritmo al movimiento de la pro- de recogida y de tratamiento de la informacin (utili-
duccin. Para ello, y dependiendo de los niveles de in- zada ya en los aos 60 en las industrias de proceso),
tegracin de la produccin que se requiere, es necesa- entra en los talleres de industria de serie con la robti-
ria una serie de calculadoras ms o menos complejas ca. De una manera que puede parecer paradjica, los
que intercambien informaciones entre ellas y con los principales obstculos que encuentra este tipo de
"logiciales" de los manipuladores. automatizacin no residen principalmente en las difi-
Se pueden distinguir varios niveles en esas mismas cultades de concepcin y de programacin de los me-
formas de automatizacin: dios electrnicos. Las autnticas dificultades giran ms
lOO 101
bien alrededor de la puesta a punto de los medios de
traslado (transportadores, tractores, dispositivos de Se pueden concebir niveles superiores de este tipo
puesta en posicin de evacuacin, de almacenamien- de integracin que corresponden siempre a grados ms
to ... ) susceptibles de ejecutar con la flexibilidad de- elevados de sofisticacin en la organizacin de la pro-
seada las instrucciones suministradas por los medios duccin. Existen talleres que agrupan varios centros
de clculo. Encontramos aqu la contradiccin ya de mecanizado o centros de mecanizado y conectados
aparecida que resulta, por un lado, del desigual nivel a MHMN. En este caso se trata de procedimientos U.
de desarrollo de los medios mecnicos de trabajo y M.C. o F .M.S. (*). El primero tiene por objetivo prin-
por otro de los medios electrnicos de tratamiento de cipal la optimizacin de la utilizacin de cada centro
la informacin y de la falta de "afmidad funcional" de mecanizado por circulacin de reparto de piezas.
entre ambas. Esto explica por qu las formas de inte- El segundo tiene por misin principal la optimizacin
gracin ms frecuentes slo consisten en sub-sistemas de los tiempos de circulacin entre las mquinas-he-
simples, es decir, un grupo de robots y de autmatas rramienta. Estos procedimientos, que estn en sus ini-
programables que alimentan y aseguran en continuo cios, tienen, sobre todo, la ventaja de poner en marcha
la fabricacin de una pieza particular. formas flexibles de organizacin de la produccin. En
el captulo siguiente las estudiaremos separadamente
Entre las formas ms elaboradas, se puede citar con el fm de poner en evidencia sus caractersticas
las lneas de robots para la soldadura "punto por pun- particulares.
to" de la fbrica de Renault-Flins. En esta lnea se Otro punto requiere particularmente la atencin.
utilizan simultneamente autmatas programables y Se refiere al empleo de los mtodos de control, no de
robots, estos ltimos dispuestos en dos lneas de en- las instalaciones sino de los trabajadores mismos. Los
samblaje y conectadas a calculadoras. microprocesadores o los terminales de ordenadores
Despus de unos perodos de puesta a punto y de instalados en mquinas no automatizadas, al recoger
aumento en la produccin que han demostrado ser informacin sobre la velocidad de corte, la frecuencia
ms largos que los previstos, parece que se obtienen de utilizacin de cada herramienta, los tiempos "muer-
unas tasas de tiempos de paro menores y unos resulta- tos" entre dos operaciones o dos utilizaciones de la
dos mejores. Sin embargo, ello no garantiza de una mquina, pueden permitir ejercer un control riguroso
manera segura la rentabilidad de esos materiales. Los de los ritmos, de la cadencia de trabajo, as como del
estudios disponibles sobre este punto son escasos y ndice de logro de las piezas (prdidas, desechos ... ).
sus resultados difcilmente interpretables dado el n- As se pude analizar y combatir en "tiempo real",
mero y la interdependencia de los parmetros a tomar sin la presencia fsica de encargados o de supervisores
en consideracin(*).
(*). Sobre este punto cf. principalmente la tentativa de puesta en orden (*). UMC : Universal Manufacturing System.
hecha por Martine Blanc (4) . FMS: Flexible Manufacturing System.
102 103
(y mucho ms eficazmente) el "freno" obrero por el sentido de una economa de tiempo en la produccin,
que (por lo menos desde Taylor), el obrero trata de
este tipo de progreso tcnico, caracterzstico de la inte-
protegerse del ritmo de trabajo demasiado rpido que gracin, se distingue de otras formas en el sentido de
le es impuesto. De esa manera, sin "cadena" Y sin que las economas de tiempo no se refieren principal-
"transportador", por medio de las nicas virtudes del
mente a la eficacia de las mquinas o de los procedi-
"tratamiento de la informacin" se pueden obtener mientos, sino a los tiempos consumidos por el sistema
mejoras en la intensidad del trabajo (38). transferencia/operacin entre mquinas y procedi-
Finalmente, los diferentes aspectos de lo que se de- mientos en curso de fabricacin. La produccin en
nomina con frecuencia "fabricacin asistida por orde-
"flujo continuo" tan grata a Ford, experimenta de
nador" (F AO), son la base de beneficios de origen
esa manera un nuevo salto adelante.
muy diverso. Se pueden resumir brevemente diciendo
que se busca al mismo tiempo:
- un mejor ndice de empleo de las herramientas y,
en consecuencia, un mejor rendimiento del capital
fijo instalado;
- una disminucin de las "en curso"; es decir, de
las piezas y de los materiales en espera de ser trabaja-
dos; en la terminologa econmica clsica, se trata esta
vez de economa sobre el capital "circulante";
- por ltimo, al estar los "tiempos muertos" mejor
delimitados y encadenados en un flujo de circulacin
cautivo, se obtiene tambin una mayor intensificacin
del trabajo vivo.
A las economas de capital fijo y de capital circulan-
te, hay que aadir progresos en la intensidad de trabajo.
En resumen, se dir que gracias a los efectos conjuga-
dos de una economa en el uso del capital fijo y del
capital circulante, conseguidos por una mejor optimi-
zacin en la gestin de los flujos productivos, nos si-
tuamos ante una nueva palanca y una nueva base del
progreso tcnico que, a raz de unos trabajos anglo-
sajones, llamaremos progresos tcnicos de tipo, "pro-
ducido en trabajo". Aunque tenga en comn con las
otras formas de progreso tcnico la de actuar en el
104
105
Talleres y
. empresas flexibles
107
el espacio distintas las unas de las otras. Como el robot
est programado desde el principio para llevar a cabo
l. El significado econmico de la flexibilidad diferentes conjuntos de operaciones, su memoria est
capacitada, en tiempo real, para reconocer las formas
sobre las cuales puede intervenir y puede por s mismo
La flexibilidad: definicin poner en marcha automticamente el programa ope-
ratorio correspondiente a la forma que se presenta
Aun cuando todo el mundo considera que la flexi- ante l.
bilidad es una propiedad de la actual generacin de Ahondando ms y por extensin, se puede pasar de
bienes de equipo electronizados, no se ha dado a esa la nocin de mquina a la de recorrido flexible. Se
propiedad una definicin nica. Cada una de ella in- dir entonces que un recorrido es flexible si las m-
siste en un aspecto de las cosas. Hay que detenerse quinas herramienta programables que lo componen
pues, un momento, en este problema de defmicin. son capaces, a Il).edida que las piezas avanzan, de reco-
En un primer sentido, el ms riguroso, pero cuya nocerlas para aplicarles los programas operatorios que
aplicacin en un medio industrial de gran serie es la les corresponden. Un ejemplo claro de este tipo de re-
menos comn, la flexibilidad de un bien de equipo corrido flexible es el de las cadenas de chapistera de
proviene de su capacidad para recoger informaciones la fbrica Renault, en Douai. El mismo recorrido de
en tiempo real de los procesos de produccin en cur- soldadura es capaz de soldar una fila de R9 y de Rll
so, Y sobre esa base, modificar en caso de necesidad, (o de Rl4) dispuestos al azar. En cada caso, el recorri-
por s mismo, su programa operatorio, para poder te- do flexible est capacitado para aplicar los tipos de
ner en cuenta los eventuales altibajos que se han ma- soldadura adecuados.
nifestado y para que sus modos operatorios sean cohe- Desde un punto de vista econmico, y tocamos aqu
rentes con la nueva situacin a la que se enfrenta. En el punto esencial, es la nocin misma de la ley de ren-
este sentido, "flexibilidad" y "capacidad de retroac- dimiento lo que se modifica por la propiedad de flexi-
cin" son casi sinnimos. Esta propiedad de ciertas bilidad de los nuevos recorridos de produccin.
mquinas programables aplicada desde hace tiempo
en las industrias de proceso continuo, es muy excep-
cional en las producciones de serie. Aunque en el fu- Flexibilidad, econom(a de escala y ley de rendimiento
turo est llamada a una cierta expansin, no vamos a
centrarnos por el momento en este sentido y en este En cuanto al fondo, la idea de economa de escala
aspecto de las cosas. es muy sencilla. Est extrada de la observacin si-
En un segundo sentido, la flexibilidad de un bien guiente: considerando un stock de mquinas dado y
de equipo designa su capacidad para efectuar opera- un nmero de obreros dado para hacerla funcionar, el
ciones diferentes que corresponden a trayectorias en precio de costo de cada uno de los productos obteni-
108 109
dos disnnuye a medida que se aumen ta el nmer o de
cala desaparece y el costo del produ cto fabricado se
produc tos fa.bricados. De ah el inters de produc ir en
ve aumen tado en trminos relativos. Dicho de otro
"grand es" series como medio de rebajar el costo por
modo, la clave de la existencia de las econo mas de es-
unidad (*). Se trata, en este caso, de rendim ientos
cala reside en la manera en que se materializa efectiva-
crecientes de las instalaciones.
mente la utilizacin de los equipamientos el par, "du-
Este supuesto se ha puesto en ocasiones en duda. racin de vida de las instalaciones/cantidad de pro-
No es nuestra intenc in aqu, volver sobre su principio. ductos fabricados". Mientras la deman da siga siendo
Bastar hacer constar que esta idea de la disminucin conocida en el tiempo y no somet ida a modificaciones
del costo unitario a medida que se aumen ta el nmer o o, dicho de otro modo, mientras sea previsible con un
de produ ctos fabricados, no tiene valor ms que sobre fuerte grado de certeza y por un perod o suficiente, la
la base de algunos slidos presupuestos implz'citos en- gran serie "rgid a" (cuyo costo de instalacin inicial
tre los que se encue ntra muy particu larmen te la hip- es ms dbil que el de la gran serie flexible que exami-
tesis segn la cual el tiempo de utilizacin y de vida naremos a contin uacin ), es una solucin que presenta
de los equipanentos son conocidos y, quizs, fijados
ventajas evidentes.
con anterioridad. En este contex to es posible admitir, J. Butler ( 11) propo ne el compo rtane nto de la
a costa de ciertas simplificaciones, que el costo medio curva de deman da en la vida de un modelo de auto-
fijo es consta nteme nte decreciente -hasta cierto punto mvil (ver figura). A partir de tal ciclo de vida del
de inflex in-, a medida que se alarga la serie de pro- produ cto, se puede determ inar claramente una sol~
ductos fabricados. cin "ptim a" que pernt a la fijacin de un cierto m-
Si, por el contra rio, el ndice de utilizacin de la vel de cadencia en los recorridos "rgid os" que asegura
capacidad instalada decrece significativamente o, lo para cierto perod o de la vida del modelo, un ndice
que viene a ser lo nsmo, si la duraci n de vida es de utilizacin de la capacidad instalada suficiente para
"abrev iada" por un ritmo de innovacin tecnolgico
beneficiarse de las econo mas de escala.
ms rpido que el previsto por ejemplo, entonces la Lo impor tante es que, de todos los presupuestos
ventaja terica que consti tuyen las econo mas de es- que estn en el origen de esta construccin de principio,
ninguno o casi ninguno tiene realidad hoy en las con-
(*). Esta cuestin de las leyes de rendimiento es una cuestin
clsica y diciones actuales de la competencia industrial. En
crucial de la economa. Una de sus primeras formulaciones la debemos
al gran economista ingls Alfred Marshall de finales del siglo pasado. efecto:
En - las variaciones de la demanda de los diferentes
trminos rigurosos, la idea que asocia a la gran serie una ley de rendi-
mientos crecientes se basa en un anlisis de los costos de explotacin
y
modelos revisten, en adelante, una gran amplitud pro-
entre stos la relacin que se establece entre costo fijo y costos variables ducindose a ritmos imprevisibles;
,
ya que la prolongacin de las series al llevar consigo una disminucin
re- - en cada uno de los modelos de base se manifiestan
lativa de la parte de los costos fijos en el coste total, el costo unitario
del producto fabricado resulta disminuido, siempre que las restantes fuertes fluctuaciones en cada una de las variantes;
condiciones permanezcan inalterables. - la duracin de vida de un modelo de base es mu-
110 1l 1
de la capacidad instalada puede estar saturado cons-
FIJACION DE LA CAPACIDAD tantemente, al adaptarse la lnea flexible a las varia-
EN FUNCION DE LA DEMANDA ESTIMADA ciones de los gustos de los consumidores. Asimismo,
la duracin de la vida del modelo no es ya una amena-
za para la rentabilidad de los materiales, puesto que
Demanda stos pueden ser reorganizados y rentabilizados en los
recorridos de fabricacin de los nuevos modelos.
En estos talleres (el de Douai entre ellos), califica-
dos por la Renault como "talleres capacitados", la
Nivel de fijacin
de la capacidad ptima flexibilidad es un verdadero reductor de riesgos.
------------ En trminos de rentabilidad, aunque la inversin
inicial sea superior (se estima que lo es entre un 20 Y
un 50 por ciento en relacin a las instalaciones de los
talleres "especficos"), esta desventaja inicial parece
t:star ms que compensada, puesto que el par estrat-
gico "duracin de vida de los equipos/cantidad de
productos sobre los cuales se distribuyen", est en
adelante regido por una economa que permite alargar
la una (duracin) y la otra (cantidad). Es as como el
Tiempo "taller capacitado" con cadencia poco elevada pero
capaz de fabricar simultneamente varios modelos
puede ser teniendo en cuenta la estructurad~ sus ~~s
tos de explotacin y a pesar de una mayor mvers10n
cho menos previsible y en todos los casos la obsoles-
inicial, de una mayor rentabilidad que el taller "rgido"
cencia es mucho ms rpida. En este campo se admite
de gran serie.
que actualmente los constructores japoneses renuevan
sus modelos cada 4 aos, mientras que los constructo-
res europeos lo hacen cada 1Oaos por trmino medio.
2. La flexibilidad de la empresa de serie pequea
En semejante situacin (caracterstica de la indus-
y media
tria del automvil, pero tambin de la confeccin, de
la electrnica de gran consumo) , las ventajas del reco-
El razonamiento, as como los ejemplos en los cua-
rrido flexible aparecen claramente. En la medida en
les nos hemos apoyado en la seccin anterior, son v-
que la misma lnea puede presentar indiferentemente
lidos sobre todo para la produccin en gran serie. Pero
diversas variedades de modelos, el ndice de utilizacin
este es slo uno de los campos de aplicacin posibles
112
113
de la flexibilidad . Las ventajas que pueden extraerse ni ca se compone de:
de la flexibilidad son igualmente perseguidas y a veces -un conjunto de mquinas herramienta (en general
ms sistemticamente todava, en lo que se refiere a la con mando numrico pero, en todos los casos, progra-
organizacin de la produccin para las series pequeas mables) o de centros de mecanizado con cambiador
y medias. Dos ejemplos que corresponden en los de herramientas ;
hechos a situaciones en que los talleres flexibles em- - un sistema de manutencin programable (trans-
piezan a estar muy extendidos permiten ilustrar este portadores, carros flloguiados, robots de manutencin
punto. Se trata del mezanizado de las piezas mecni- y de puesta en posicin ... );
cas por un lado, de talleres y de empresas de confec- -por ltimo, de una gestin informtica encargada
cin por otro. En el caso de la mecnica ya lo haba- del pilotaje del "conjunto" .
mos dicho, la variedad de modelos es la que hacreado De esta manera se ha podido representar sinttica-
esa necesidad de agilidad y de produccin. En lo que mente las combinaciones tecnolgicas mejor adaptadas
se refiere a la confeccin, -campo donde los gustos segn los tipos de produccin y los niveles de flexibi-
de los consumidores cambian y son imprevisibles por lidad perseguidos.
excelencia a causa de la moda-, la organizacin en En lo que se refiere al taller flexible, se trata del es-
talleres flexibles ha aparecido rpidamente como una tablecimiento de un compromiso entre productividad
solucin particularmente adaptada. De manera general, y agilidad. Se busca la productividad, no tanto por
se puede decir que el taller flexible es requerido cada medio de una gran rapidez de los ritmos de circulacin
vez que se exigen: y de ejecucin de las piezas, sino mediante una reduc-
- modificaciones en las caractersticas de las piezas cin de las en-curso y de los costos de organizacin.
o de los elementos a producir; Segn se trate por un lado, de la gran serie o por otro,
- una rpida adaptac;in a los altibajos de los pedi- de la pequea o media serie, la proporcin entre pro-
dos, de los aprovisionamientos, de los plazos, etc ... ductividad y agilidad no es la misma. Por parte de la
En el terreno de la tecnologa, la obtencin de la gran serie se busca una agilidad limitada pero con ritmo
flexibilidad supone la utilizacin y la puesta en cohe- relativamente rpido; por el contrario, una gran adap-
rencia de una serie de materiales especficos que con- tabilidad y flexibilidad con cadencia poco elevada, co-
ciernen en principio no slo a la produccin propia- rresponde mejor a la pequea y media serie.
mente dicha, sino tambin a la alimentacin de las l- En nmero, los talleres flexibles son poco numero-
neas de fabricacin. As, en las formas evolucionadas sos todava. Y en este campo los japoneses parecen
de los talleres flexibles, la gestin y la alimentacin de disponer an de cierta ventaja. En efecto, se estima
las lneas de produccin se hace automticamente, es- que ms de un centenar de talleres dotados de una
tando asegurada la gestin de los stocks por unos or- cierta agilidad estn en funcionamiento y sobre todo,
denadores conectados a las lneas de produccin. Un varios constructores de robots y de autmatas estn
taller flexible de mecanizado en la fabricacin mec- capacitados para proponer conjuntos "flexibles" prc-
114 115
ticamente sobre catlogo. Este es el caso de Fanuc, de tan diversos como son la pequea mecnica, la con-
Toyota, de Aide Engeneering (para las lneas de mol- feccin, el calzado, etc.), estos talleres ocupan unlugar
deado sobre todo ... ), de Toshiba y de Hitachi. En importante en tanto que auxiliares de la gran empresa
Francia, esta tecnologa padece un retraso general; el y tambin como propios productore s, siendo su prin-
mismo que afecta a la industria nacional de las mqui- cipal cualidad precisamen te la de adaptacin muy r-
nas-herram ienta y principalm ente a las MHMN. Algu- pida a las fluctuacion es del mercado.
nas realizaciones, en general fuertement e apoyadas A partir de estas constatacio nes, los autores plan-
por los poderes pblicos, estn en curso y algunas tean varias preguntas. Esta forma y este tipo de empresa
hasta en fase de produccin . Este es el caso de los dos que se ha desarrollado espontnea mente en la crisis
talleres de Caterpillar en Grenoble, de Ranault Vhicu- no podra, como objeto de una poltica razonada,
les Industriels en Bouthon (piezas de cajas de cambio), constituir uno de los elementos explcitos de una po-
y de un taller del grupo PSA. ltica industrial ms amplia? La tesis de los autores es
clara. Segn ellos no parece viable que la gran empre-
sa pueda desaparecer en un futuro prximo. A fm de
3. La empresa flexible y la crisis cuentas, el papel de la pequea empresa no es el de
competir con la gran empresa. La idea desarrollada
Todo lo que se acaba de describir ha sido presentado por los autores es ms bien la de una complemen tan-
como vlido principalm ente para las empresas que se dad que habra que buscar entre los talleres y las em-
esfuerzan en romper la rigidez de las tcnicas taylo- presas flexibles o "especfica s", segn los segmentos
rianas y fordianas. Pero se puede ir ms lejos e indicar de produccin o de mercado (*).
ya ciertas orientacion es de carcter ms macro~con La idea es audaz. Hay que prestarle atencin por-
mico. En un importante estudio que se esfuerza en que est tomada de la observacin de comportam ien-
extraer unas conclusiones generales a partir de unas tos reales que estn ya en juego en la industria. No
investigaciones llevadas a cabo en Italia, los seores habr que considerar como novedades duraderas para
Piore y Sabel han formulado una serie de observacio- la economa industrial de maana a las pequeas Y
nes: medias empresas flexibles, auxiliares o complemen ta-
Oponindo se a una idea preconcebi da -y sin duda rias de la gran empresa, cuya aparicin est ligada a
un tanto antigua- que dice que las empresas del sector la crisis o a las mutaciones que sta ha suscitado?
"informal" estn todas constituida s por semi-presidios Merece la pena formular esta pregunta.
modernos, Piore y Sabel citan numerosos ejemplos de
pequeas empresas nacidas al calor de la crisis, al mar-
gen o en la periferia de las grandes. Contando con
efectivos restringidos pero equipadas de talleres flexi-
(*).Esta idea est desarrollada igualmente en la investigacin muy pre-
bles y de mquinas con mando numrico (en sectores cisa de Barisi y Dubois (27).
116 117
CUARTA PARTE
EL TRABAJO Y EL EMPLEO
REDISTRIBUIDOS
122 123
en esas industrias, ya que la lucha por los segundos Y aunque de manera abstracta se pueden defmir de
constituye el objetivo principal. Y es la razn, igual- manera anloga, lo que sucede en las industrias de
mente, por la que en estas industrias las luchas obre- proceso continuo, como tareas generales de "vigilan-
ras contra los ritmos y las cadencias son constantes . cia" destinadas a prevenir los problemas o a actuar so-
bre las disfunciones, hay que reneter que el "seguimien-
to" no concierne a las operaciones fsk .)-qumicas
que se desarrollan a ritmo lento, sino a unas series de
El papel de la automatizacin transmisiones y de operaciones a ritmo rpido. Las
mquinas producen decenas de piezas, cada una en
Suprimen los robots este estado de hecho, esencial fracciones de minuto. Los robots no han eliminado
a toda industria de serie? S, contestan los diarios de la produccin en gran serie en tiempo fraccionado.
gran tirada (y por desgracia no slo ellos ... ); los obre- Los obreros encargados del "pilotaje" tienen pues que
ros de los talleres robotizados slo tienen que efectuar "administrar" y vigilar unos subconjuntos de opera-
una tarea de vigilancia y de control. La "cadencia" ha ciones y de transmisiones que se efectan a un ritmo
desaparecido; el ritmo est asumido por los sistemas elevado y para una gran cantidad de piezas. El resul-
automticos de trabajo. tado es que, aunque ya no efecten "directamente"
Hay que contrarrestar estas representaciones enga- estas operaciones, las tareas de vigilancia siguen siendo
osas. Pensar que el trabajo se convierte en una simple tareas muy "pesadas", donde permanece la imposicin
tarea de vigilancia es falso por varias razones. del ritmo.
l . No han desaparecido ni la cadencia ni los ritmos
de trabajo. Las piezas que hay que elaborar continuan 4. Para concluir, diremos que la imposicin central
circulando entre los puestos, y a menudo -este es de las industrias de serie (el hecho que la cantidad de
productos obtenidos depende del ritmo de trabajo):
adems uno de los objetivos de la automatizacin-
- se mantiene en principio igual a s misma para
con cadencia acelerada.
2. Los ritmos automticos de trabajo son incapaces
toda una serie de operaciones directas que no han po-
de hacerse cargo, (hasta en los talleres que se supone dido ser eliminadas. En este caso la imposicin del rit-
estn altamente automatizados), del conjunto de las mo no slo no est abolida sino que est reforzada:
tareas de circulacin o de operacin. Una gran parte - que ah donde los sistemas robots-autmatas son
de ellas siguen siendo tareas manuales, que hay que los que se hacen cargo de la produccin, aunque el
ejecutar a ritmo rpido. obrero a quien se confa el seguimiento y la vigilancia,
3. Ah est quizs lo esencial, pues las tareas de si se ve exonerado de las tareas de intervencin directa,
control-vigilancia-conduccin de los aparatos son ta- permanece sin embargo bajo la imposicin de los rit-
reas de seguimiento de la produccin, si nos atenemos mos (aunque de manera "desfasada"). Para que la
al contenido concreto del trabajo exigido. produccin de flujo continuo pueda desarrollarse, tie-
124 125
ne que intervenir frecuentemente y en muy numerosos Finalmente, aunque no se trata de negar que la
puntos del recorrido y de las instalaciones. automatizacin de serie modifica la naturaleza del tra-
De una manera ms general, aparte de esta rapidez bajo concreto requerido a los obreros, no hay que ol-
de intervencin, el obrero tiene que mantener cons- vidar que el taller de serie aun estando automatizado,
tantemente en alerta un conjunto de actividades men- es un taller donde el trabajo se efecta bajo la imposi-
tales. He aqu un ejemplo de las cualidades requeridas cin del tiempo y a un ritmo rpido.
a un obrero "experimentado" de pilotaje de unidades La puesta a punto a la que acabamos de proceder
automatizadas tal como vienen descritas por un gran permite entrar en el detalle de las mutaciones que in-
constructor de automviles. El obreto tiene que tervienen en la organizacin del trabajo y de la pro-
poseer: duccin.
" 1). La capacidad de captar las conexiones y las
interacciones de los diferentes elementos sin tener
ms conocimiento que el del papel de cada uno de 2. La recomposicin de la plantilla del empleo
esos elementos( ... )".
Dicho de otro modo, como "(. .. ) es imposible pro- Lo ms sencillo es comenzar por la organizacin
porcionar una formacin profundizada en cada una tradicional, tal como se presenta en la industria del
de las tecnologas en accin en una instalacin auto- automvil en particular, pero ms generalmente en to-
matizada ... ()",el obrero tiene que ser capaz de "cap- das las grandes fbricas que emplean mano de obra. A
tar" la manera en que se inter-accionan". partir de ah ser posible indicar y localizar las muta-
" 2). La capacidad de asimilacin es un segundo ciones y la evolucin provocada por la automatizacin.
criterio importante puesto que corresponde a la inte- Esta organizacin jerarquizada obedece a los princi-
gracin de conocimientos complejos, lo que requiere pios taylorianos clsicos en lo siguiente:
una comprensin y una organizacin de los datos con - el trabajo de concepcin (la organizacin de los
el fm de memorizarlos". recorridos de produccin) est separado y por encima
" 3). Se requiere plasticidad mental, es decir, la ca- del trabajo del taller;
pacidad de cambiar el tipo de razonamiento en funcin - en el taller, la fabricacin est separada del man-
de las situaciones encontradas sobre todo cuando se tenimiento y las dos divisiones presentadas como
trata de diagnosticar averas e incidentes". "funcionales" estn altamente jerarquizadas;
" 4). As mismo hay que tener en cuenta la flexibi- - por fm, dos principios juegan un papel clave en
lidad, aptitud para dar respuestas diferentes frente a el trabajo de fabricacin propiamente dicho: 1) una
la misma fuente de informacin, porque el personal fuerte parcelacin del trabajo de los ejecutantes direc-
puede llegar a tener que considerar unas soluciones tos (se trata de los niveles P3 y AP, esta ltima califi-
distintas para resolver el problema planteado (. .. )". cacin es la nueva manera de llamar al obrero especia-
lizado); 2) las funciones de control (cuya parte central
126 127
es el simple control de trabajo de los obreros especiali-
zados y de los AP), son confiados a agentes particulares
La organizacin tayloriana clsica (encargados y jefes de equipo principalmente) y estn
separadas de los trabajos de ejecucin. Todo ello de-
El esquema siguiente la representa brevemente. termina un sistema de puestos y funciones cuya anti-
gedad slo tiene parangn en su rigidez.
130 131
aproximadamente el 25 por ciento de los empleos de defectos de ajuste y ms generalmente de las disfun-
las categoras AP P3 estaran condenados a desapare- ciones del flujo productivo. En la prctica ello signifi-
cer. En relacin al empleo total, este porcentaje es ca dos cosas en cuanto a los obreros encargados de la
considerable puesto que la categora AP P3 constituye conduccin de autmatas se refiere:
aproximadamente el 70 por ciento del total del perso- a) tienen que disponer de una relativa libertad de
nal que trabaja en las actividades del "HACER" (en movimiento y de accin para anticiparse o para actuar
las cuales estn includos igualmente los empleados). rpidamente sobre las disfunciones;
Esta cifra bajara a 52 por ciento en 1990. b) se requiere una cierta polivalencia por el hecho
El fuerte porcentaje de obreros de fabricacin AP de la interdependencia de estos diferentes materiales.
P3 que quedara (52 por ciento), indica sin embargo, La evolucin de que se trata aqu presenta un carc-
claramente, que, por una parte, no todos los talleres, ter relativamente paradjico. Por un lado, en efecto,
ni mucho menos, estn implicados y por otra, que en las nuevas exigencias de polivalencia, de movilidad Y
el seno mismo de los talleres automatizados, una parte de capacidad de iniciativa hacen pensar irresistible-
significativa del trabajo directo de los obreros especia- mente en las tareas confiadas a los obreros de vigilancia
lizados y de AP seguira siendo necesaria. Lo cual en las industrias de proceso continuo. Por otro, no
confirma lo que adelantbamos en cuanto al carcter hay que perder de vista nunca que permanece y sub-
descaradamente exagerado y deformado de las su- siste la imposicin de la gran serie y de la produccin
puestas "fbricas sin obreros". de piezas a cadencia regulada. En efecto, el obrero del
taller fordiano -aunque automatizado- tiene que
2. Aparte del trabajo "directo" de intervencin hacer frente a una cantidad y a una variedad de azares
sobre la materia, se puede observar una segunda gran tales, que diferencian netamente su situacin de la del
tendencia: el crecimiento de las tareas de vigilancia- obrero de proceso continuo de "bata blanca" que
control-conduccin. El aspecto ms significativo de opera desde una sala de control automatizada. As las
esta evolucin es el corrimiento de una parte del "pantallas" donde el obrero fordiano toma las infor-
trabajo de ejecucin propiamente dicho hacia un maciones son calificadas por la Renault como "simples
trabajo de vigilancia-control-conduccin. Recordemos pupitres de ayuda al mando". Hay que aadir que, en
que ste tiene que ejecutarse en unas condiciones de- la prctica, las "pantallas" no contienen ms que una
terminadas. Esta evolucin general que se impone a parte de las informaciones que necesita el obrero. Y a
los obreros tiene su origen en que la fortsima interde- menudo, las informaciones de que dispone no son las
pendencia de las diferentes operaciones as como el que necesitara y las que considera como ms perti-
costo muy importante de las instalaciones, exige, (para nentes. Tiene pues que compensar esta ausencia por
que la produccin se desarrolle de manera ms conti- una presencia incesante alrededor de las instalaciones,
nua) una atencin y una vigilancia extremas, y tambin para comprobar "de visu" y con sus propios sentidos
una gran rapidez de intervencin en caso de avera, de los riesgos de disfunciones o bien la naturaleza de las
132 133
averas para prevenirlas. reparten entre obreros de fabricacin de alto nivel
Sobre todos estos aspectos, decisivos para evitar (P2, Pl) y tcnicos de taller.
muchos errores sobre la naturaleza y el sentido del Considerando las tareas de fabricacin en su con-
trabajo obreros en los talleres fordianos, Daniellou junto, se asiste a un incremento del peso relativo de
(17) indica que cualquiera que sea el puesto terico las profesiones ligadas a la electrnica y a la regula-
(vigilancia de las transmisi.ones, de los robots soldadu- cin con respecto a la formacin y a los oficios clsi-
ra, etc ... ) el obrero interviene a menudo varias .veces cos relacionados con la mecnica. Este punto es im-
por minuto, so pena de ver bloquearse toda o parte portante y volveremos a tocarlo, porque mediante
de la instalacin que tiene a su cargo. esta modificacin en el "perfil" profesional requerido,
lo que est en juego es un cambio en la composicin
sociolgica de la clase obrera. Se pasa as de un tipo
3. Esta evolucin del papel de los obreros de con- de obrero (profesional - mecnico) que constituye la
duccin de los sistemas automatizados conlleva una base del sindicalismo actual, a otro tipo de obrero
redefmicin esencial de la funcin de preparador. El (electricista, "joven" y escolarizado), cuyos compor-
preparador (as como el obrero mecnico clsico) pare- tamientos culturales y polticos -en particular en lo
ce ser una de las vctimas centrales del nuevo sistema. que se refiere al sindicalismo- corren el peligro de ser
Una parte de las regulaciones y de las reparaciones netamente diferentes.
que le eran confiados en el antiguo sistema vendr
asegurada en adelante por los obreros de conduccin.
En la otra punta de la cadena, las tareas de diagnsti- Evolucin de las funciones de mantenimiento
co, de intervencin o de mantenimiento ms cualifica-
das superan, en situacin normal, sus actuales compe- Tambin, a este nivel, interviene una reordenacin
tencias. Por ello este puesto es, sin duda, uno cuyo importante de los conocimientos y de las aptitudes re-
contenido est siendo modificado profundamente. En queridas. La direccin de los mtodos ha llegado a
este caso tambin, sin embargo, depende mucho de la distinguir, por comodidad, tres niveles de mantenimien-
formacin inicial del titular del puesto y de la poltica to en las secciones automatizadas de la produccin:
desarrollada a su respecto por la empresa. - regulacin de los autmatas y de los robots, pe-
queas reparaciones en caso de disfunciones repetidas;
4. Por ltimo, las tareas de programacin se vuelven -reparacin ms pesada que implica cierta investi-
pesadas y complejas cuando se pasa del simple ajuste gacin de diagnstico y un conocimiento de las prin-
de las herramientas mecnicas a unas tareas consisten- cipales conexiones;
tes en introducir en las memorias de los autmatas o - reparaciones complejas que suponen un conoci-
de lor robots, los programas de las operaciones que miento profundo de los materiales, de la instalacin y
deben repetir despus. Segn su nivel, las tareas se de las regulaciones que estn en juego.
134 135
De hecho, en la prctica, estas series de tareas se es- En cierta medida, los jvenes franceses diplomados
cinden en dos conjuntos: por una parte, las que han encontraran ah una salida privilegiada ...
sido introducidas en la fabricacin y de las cuales se
hacen cargo los obreros de conduccin de los autma- Como se ve, el taller automatizado es el !)lanco de
tas (se trata de las reparaciones ms sencillas); por profundas remodelaciones. Estas son tanto ms impor-
otra, las tareas de mantenimiento y de reparacin ms tantes que su desenlace -las soluciones estabilizadas
complejas confiadas a un servicio especializado de a las que van a dar lugar- no es todava perceptible
mantenimiento de obreros y de tcnicos cualificados de manera clara. Con ocasin del reajuste de los cono-
o altamente cualificados. Si entramos ms en detalle cimientos requeridos se ejerce un juego complejo de
de las cosas, dos tendencias se perfilan en cuanto a la relacin de fuerzas entre categoras, que constituye,
evolucin de los trabajos de mantenimiento. sin duda, una de las ms importantes apuestas de las
consecuencias de la entrada de la microelestrnica en
l. Igual que en la fabricacin, pero ms claramente el taller. El examen de las formas sociales que reviste
todava aqu, se opera un desplazamiento en la natu- la divisin del trabajo en los nuevos talleres permite
raleza de los conocimientos requeridos: el lugar cen- precisar este punto.
tral lo ocupan los conocimientos en electricidad, en
electrnica y en regulacin, en perjuicio relativo de
los oficios ligados a la mecnica, que constituan tra-
dicionalmente lo grueso de los efectivos cualificados y
sindicados de la metalurgia.
136 137
La divisin del trabajo:
exclusin e integracin
140 141
ser polivalentes, poseer una capacidad de diagnstico las mismas tendencias en la modificacin del conteni-
y de intervencin en caso de necesidad. El texto cita- do del trabajo. Sin embargo, no estn reflejadas en los
do anteriormente (p. 55) describe con precisin estas sistemas de clasificacin y de la organizacin de las je-
aptitudes cuya existencia se comprueba por medio de rarquas. Aqu, de nuevo, si precisamos que Flins es
unos tests; estas aptitudes, debidamente sometidas a una fbrica de obreros especializados emigrantes poco
prueba, son la garanta para entrar en la "noble y va- afiliados a sindicatos, pero cuya combatividad es par-
lorizada" plantilla de CCUA. ticularmente fuerte y se expresa bajo forma de revuel-
Para entender por qu la plantilla CCUA fue prime- tas brutales, se tendr, sin duda, una parte de las claves
ro instaurada precisamente en Le Mans, no est de que permiten explicar las diferencias.
ms recordar que la poblacin obrera de la fbrica de Porque ah est el punto central en el cual hay que
Le Mans presenta algunas caractersticas que la distin- detenerse ahora. La modificacin de las bases tcnicas
guen de manera singular. Se trata de una poblacin de la produccin da pie a una remodelacin de las
francesa muy estable (poqusimo absentismo o rota- polticas de utilizacin y de gestin de las fuerzas
ciones "tum over"), altamente sindicada (donde la in- del trabajo; polticas netamente diferentes entre s y
cidencia de la CGT es, por mucho, la mayor). Por lti- que dependen de las tradiciones de la empresa, de la
mo, se trata de una fbrica cuyos obreros han dado poblacin obrera a las cuales estn dirigidas y de los
siempre prueba de combatividad: entre las primeras objetivos estratgicos perseguidos por la empresa en la
huelgas de obreros especializados sobre eltaylorismo, materia. En esta gran remodelacin, la formacin ocu-
la del taller de trmicas de Le Mans, en 1971, pas a pa un lugar central.
la historia. Aun antes de la robotizacin, ya se haban
instalado en esta fbrica unos "grupos autnomos" y
unas formas diversas de trabajo enriquecido y amplia-
do. De esta manera esta fbrica ha constituido tradi- 2. Exclusin e integracin: el papel clave
cionalmente un terreno privilegiado para la experi- de la formacin
mentacin social de la patronal.
Ello, sin duda, no explica todo pero ciertamente Dos trminos extremos permiten calificar las estra-
explica una parte de las cosas ... tegias de empresa respecto a los colectivos obreros de
los talleres implicados por la automatizacin:
3. Si examinamos ahora el caso de Flins, el hecho - por una parte, la exclusin bajo formas diferentes;
de que -hasta hoy-la lnea jerrquica tayloriana cl- - por otra, una estrategia de integracin compleja
sica no haya sido modificada tiene que llamar igual- y modulada.
mente la atencin. Sin duda alguna se trata de un taller
diferente del de Le Mans; taller de ensamblaje y no de
mecanizado. Pero en este taller como en aqul, se dan
142 143
las tareas de conduccin-direccin. Si se les mantiene
en el taller, se les asigna tareas consideradas como "re-
La exclusin o "los zoquetes del progreso tcnico". siduales", de las que no se hacen cargo los conductores
de autmatas y que perduran en un nmero ms o
Principalmente esta poltica de exclusin se lleva a menos importante.
la prctica entre los obreros especializados. Y aunque Digmoslo de manera clara: existen por lo menos
el blanco lo constituya principalmente la poblacin dos aspectos que hay que distinguir en este fenmeno
emigrante, no slo se reduce a ellos. Tambin son de exclusin. El primero resulta de la fra violencia de
vctimas de la exclusin los trabajadores con edad, los la tecnologa. En la medida en que se va volviendo
que se juzga que no tienen suficiente nivel de formacin ms compleja, en el caso de no aplicar una poltica ac-
inicial esta medida concierne, por esta razn, a mu- tiva y resuelta de formacin, va a excluir a todos los
'
chas mujeres obreras especializadas. "zoquetes del progreso" -como escriba Richard
Hay que entender la exclusin, que puede revestir Clavaux en un reciente artculo del "Monde Diman-
varias formas, en un doble sentido. che" -, para quienes el bajo nivel de escolarizacin
Puede haber exclusin fz'sica pura y simple, por inicial o la edad presentan un obstculo para la forma-
supresin de puestos y de trabajos. Aunque se proce- cin. El segundo aspecto es totalmente diferente. La
da por medio de despidos o por otras tcnicas de "lim- exclusin, fsica o no , es entonces el resultado de una
pieza", (llmense "salidas naturales", "retiro anticipa- poltica voluntaria. Se toma como pretexto el cambio
do", "ayuda al retomo" para los emigrantes), en el tecnolgico para romper los colectivos de trabajadores
fondo no cambia nada el asunto, aunque para el obre- que han dado muestra de su combatividad. Sobre to-
ro implicado en el proceso de despido, ste sea desi- do en el caso de los emigrantes y que en una intensa
gualmente brutal. No hay que olvidar que en todos propaganda dentro y fuera de la empresa -en estos
los casos, la automatizacin tiene que ir acompaada tiempos de paro en masa-, prepara la opinin a las
de reducciones de efectivos en el taller: la rentabiliza- ventajas que presenta una poltica de sustitucin de
cin de los dispositivos automatizados se hace a ese franceses/emigrantes para los jvenes del pas.
precio. Slo hay que leer los folletos de los construc- De este modo, aun no habiendo un determinismo
tores: no hablan ms que de trabajo "ahorrado". tecnolgico estricto, existen vivas y presentes unas
estrategias de empresa respecto a los diversos segmen-
Pero la exclusin se puede llevar a cabo de mane- tos de la poblacin obrera. Y la historia, obstinada-
ra ms sutil. No se trata entonces de exclusin fsica mente, repite que si se ataca, se aisla y se destruye
sino de exclusin del colectivo o del equipo de traba- uno de ellos, el conjunto de la poblacin obrera es
jadores implicados directamente en la implantacin de quien paga el precio, tarde o temprano.
los automatismos. En este caso, se aparta a los traba-
jadores de la formacin que les permitira acceder a
144 145
La integracin ESTRATEGIA DE INTEGRACION :
ESCALAS DE PROMOCION/F ABRICACION/MANTENIMIENTO
En el extremo opuesto, la estrategia seguida por la Profesionales y . Profesionales y Empleado tcnico
empresa es la de la integracin. Aqu tambin, la inte- contramaestres de contramaestres de de
gracin se debe entender en un doble sentido. Prime- fabricacin mantenimiento mantenimiento
ro, en un sentido casi tcnico. Una poltica de forma- AP P3F
cin permite la reconversin de todos o parte de los _.,P2 ... ET240
.
trabajadores del antiguo taller a la gestin y a la direc- CCUA.__.- 2 nivel de 3er. nivel de
cin del nuevo taller automatizado. En esta direccin 1er nivel de mantenimiento mantenimiento
ET260 Empleados tcnicos
la poltica puede lle~arse bastante lejos. Por una parte, _j;fe de equipo automatizadores
ya se ha dicho anteriormente, puede dar origen a la
creacin de una nueva plantilla (tipo CCUA), pero Responsable de....,. Encargado de Especialista de alto
puede igualmente apuntar a la integracin de los em- produccin mantenimiento .....,. nivel
pleos de "fabricacin" y de "mantenimiento" en el Jefe d e t a11e r ~
seno de una escala nica con unos pasos previstos y Tipo mantenimiento
organizados en los diferentes niveles de la escala de
conjunto. El esquema siguiente muestra, a ttulo indi- Fuente: M. Blanc (5).
cativo, los pasos que pueden darse en este campo.
Semejante esquema, posible y practicable, sigue
siendo perfectamente terico. No excluye las discri-
minaciones, de hecho, ligadas a la capacidad desigual desarrollado hace mucho en las industrias de proceso
de los obreros implicados segn su nivel de formacin continuo, donde - en la industria petroqumica por
inicial, su edad, su nacionalidad, de subir de categora ejemplo- se hizo todo para convencer a los obreros y
o, al contrario, de chocar con la escala de categoras. a los tcnicos de conduccin-direccin de los autma-
Adems, en este caso, de manera clara otra vez, s.e ve tas, que ellos eran los verdaderos "profesionales del
que el peso relativo de los electricistas crece a costa oficio", en contraposicin a los mecnicos o a los cal-
de los mecnicos, porque en este terreno mUcho de- dereros, por ejemplo, que trabajan con ellos, sea perma-
pende de la capacidad de los obreros para perfeccionar nentemente o en rgimen de contratas. En la prctica,
sus conocimientos en los diferentes oficios de la elec- la direccin de las empresas se orienta hacia "jvenes
trnica . . con potenciales" para conducir y mantener las instala-
Sin embargo, la integracin tiene que entenderse ciones automatizadas. Formacin intensa y constante-
igualmente en otro sentido menos tcnico. Desde este mente puesta al da, escala de promocin particular,
punto de vista, el fenmeno es anlogo al que se ha pero tambin aislamiento en unas partes determinadas
146 147
de las instalaciones, almuerzos en comn ... todo esto
para intentar constituir un "espritu" que puede desa-
rollarse ms fcilmente cuanto que el trabajo con au-
tmatas es particular, constreido y supone una coo-
peracin y un gusto por la tecnologa.
En realidad, la poltica de las empresas oscila entre
la exclusin y la integracin y es, frecuentemen te,
una mezcla de las dos. Todo es cuestin de oportuni-
dad y de la capacidad de resistencia de los obreros im-
plicados. Por decirlo de manera clara, la formacin, su El empleo
control, las modalidades segn las cuales se proporcio-
na, las categoras que se benefician de ella ... todo esto
juega un papel clave de discriminacin.
148 149
me, por el contrario , que una modernizacin demasia- cuenciales? Los instrumentos estadsticos que permi-
do tarda no acelere todava ms los "destrozos". tiran semejante estudio no existen .
Qu es lo que hay que pensar de todo esto? La
tecnologa y los robots no son ni el diablo ni dios. Y Sin embargo, suponiendo que sea posible locali-
reducir el impacto especfico de los automatismos se- zar lo que es imputable a las inversiones y a los auto-
cuenciales (reducidos o no a la sola variable "robots y matismos, es necesario contabilizar slo los empleos
manipulador") sobre el empleo, es prcticamente im- destruidos y creados directamente e intentar estable-
posible. Sobre este punto no se puede proporcionar cer un saldo; o bien hay que contabilizar tambin los
ms que unas cuantas ndicaciones que tienen un va- empleos "conservados" que slo la automatizacin ha
lor tanto ms limitado cuanto que necesitan ser razo- permitido mantener? En este terreno, es particular-
nados, suponiendo que todos los dems parmetros mente necesario no fiarse de las ilusiones de ptica.
permanecen incambiados, cuando precisamente la de- Los resultados de una encuesta japonesa sobre la
cisin de robotizar tiene por objetivo explcito el mo- automatizacin de las pequeas y medias empresas re-
dificar la disposicin y el encadenamiento en el tiempo flejan que las que se han automatizado han acrecenta-
de dichos parmetros. do su parte global de empleos en el sector. Hay que
sacar de ello la conclusin de que la automatizacin
ha creado empleos? No, porque un anlisis ms por-
l . Una gran diversidad de parmetros menorizado de los datos hace aparecer que las empre-
sas automatizadas se han beneficiado de pedidos su-
El nmero y la interdependencia de los parmetros plementarios, suprimidos a otras empresas que no se
hacen surgir de esa manera unas temibles preguntas de han automatizado y que han desaparecido simplemen-
mtodos y de terreno de observacin. He aqu algunas te. Si se considera en su conjunto, el empleo industrial
de ellas: del sector ha disminuido y la automatizacin tiene
mucho que ver en ello.
Hay que considerar la empresa particular -aun-
que esta fuese ideal y tomada como prototipo- o Cul es el plazo para que los datos y los resulta-
bien hay que considerar la economa en su conjunto? dos eventuales tomen su significado? Recientemente
A. Sauvy ha mostrado que las consecuencias de las
En este caso y basndose en las series estadsticas nuevas tecnologas provocan a la vez ciclos de des-
y los modelos economtricos disponibles cmo hacer truccin y de creacin de empleos. Pero que stos no
la divisin en la evolucin que se puede observar del se efectan en el mismo plazo de tiempo.
empleo y de lo que atae propiamente a la inversin Podramos alargar todava ms la lista de las pre-
en capital fJjo? Y en esta inversin qu parte corres- guntas que quedaran sin respuesta. Es mejor tener en
ponde a los que estn elaborados en automatismos se- cuenta, por medio de aproximaciones sucesivas, algu-
150 151
nos resultados conseguidos que pueden servir de base
a una reflexin ulterior ms profunda. Proceso Obreros qumicos cualificados.
Obreros cualificados en el traba-
jo del vidrio.
Un efecto contrastado segn los oficios Obreros cualificados en la fabri-
cacin del papel y del cartn.
Primera verdad: la robotizacin no concierne de Obreros cualificados en el traba-
igual manera a todos los oficios. Ms que nada, no jo del cuero.
todos estn llamados a desaparecer o a disminuir. Se Obreros cualificados en la trans-
ha podido establecer de esta manera una especie de formacin de materias plsticas.
primer inventario y clasificar los oficios que son el Obreros cualificados en el traba-
blanco, en dos conjuntos. Aquellos que estn conde- jo de hornos.
nados a disminuir. Se obtiene entonces la casilla
siguiente: Grandes series Obreros cualificados en los tra-
bajos de pintura industrial.
Obreros cualificados fundidores.
Laminadores en caliente, en fro
PUESTOS CUY A IMPORTANCIA DEBERlA y asimilados .
DISMINUIR POR EL HECHO DE LA Obreros cualificados del trabajo
AUTOMATIZACION en caliente de las piezas metli-
cas.
Tipo de material Empleo Soldadores profesionales.
Grandes series Obreros especializados. MHMN Obreros especializados en m-
Proceso Peones. quinas (torneros, fresadores, etc.)
Empleados no cualificados de
almacenamiento y del manteni- Grandes series y Personal tcnico de los servicios
miento. proceso (empleos de gestin de la produccin.
Empleados cualificados de alma- principalmente afec- Personal que asegura el control
cenamiento y mantenimiento. tados de manera dis- de los servicios de gestin de la
Conductores de gras. tinta). produccin.
Encuadramiento del almacena-
miento y del mantenimiento. Fuente: (29).
Contramaestres.
152 153
Esta lista est lejos de ser exhaustiva. Sobre todo, maciones y de las previsiones. Estos datos tienen que
lo que hace es alinear en el mismo plano oficios dife- tomarse tanto ms prudentemente cuanto que las ins-
rentes y da cuenta muy imperfectamente de los efec- tituciones que los emiten suelen tener segundas inten-
tos reales, porque la columna "obrero especializado", ciones y persiguen objetivos propios por medio de las
por ejemplo, representa, en la industria del automvil, cifras que divulgan.
casi el 70 por ciento de los empleos de fabricacin, Si nos atenemos a la incidencia de la automatizacin
mientras que la columna "contramaestres" agrupa en las industrias fabriles, (las primeras implicadas tra-
menos que el 5 por ciento. tndose de la robtica), se pueden clasificar los datos
En el otro extremo, tambin se ha establec.i do una disponibles en tres niveles sucesivos. Los relativos a la
lista de empleos cuyo nmero est llamado a aumentar. empresa, a la rama y los que se aventuran a previsiones
Entre estos hay que destacar principalmente: ms globales.
- obreros mecnicos de mantenimiento
-obreros especializados en mquinas
- obreros especializados altamente cualificados 2. Industrias fabriles: un saldo negativo
- ajustadores de mquinas herramienta automticas
- conductores de pantallas Todos estos datos concuerdan en un punto. No hay
- contramaestres tcnicos (jefes de servicio) "compensacin". Dicho de otra manera, los empleos
- ingenieros (principalmente los especialistas en creados estn lejos de compensar los empleos suprimi-
electrnica(*) dos. Las diferencias se refieren solamente a la amplitud
- tcnicos especialistas en pruebas, control, labora- de este saldo, considerado como negativo en todos los
torio(**) casos.
- especialistas y tcnicos de la organizacin del
trabajo.
Unas encuestas de taller
Es necesario hacer unas precisiones sobre esta prime-
ra enumeracin. Aparte de algunos datos, siempre muy Las monografas sobre el taller son tajantes; el vo-
oarciales
, ' se entra a menudo en el -campo de las esti- lmen global de empleos (todas las categoras mezcla-
(*). En estas dos ltimas categoras hay que contabilizar aparte los em- das) disminuye de manera drstica. He aqu algunos
pleos creados en el taller automatizado que, en realidad, son todos los ejemplos edificantes. El primero est tomado de la
que estn ligados a la expansin informtica de las "sociedades de servi- firma Thomson. Se trata de un taller de componentes
cio" y que pueden llegar a ser numerosos. Hablando de manera rigurosa,
se trata de empleos creados, no por la robtica en sentido estricto, sino elctricos. Las cifras facilitadas por el informe Lasfar-
por el desarrollo casi global de las industrias ligadas a la "rama electr- gue son las siguientes:
nica".
(**).Ver 11ota anterior.
154 155
HACER, lo que es una categora ms amplia que la de
Proceso Proceso fabricacin ms tradicional.
automtico manual De todas formas, el resultado no deja de ser inquie-
Cuadros . . .. .. ... (2 ,4~~
tante.
2 (5,7%) 3
Oficiales de l"'(Pl ). 3 (8,5'1.) o
Oficiales de 3(P3). 3 (8,5 'Y~ 7 (5,6%)
Especialistas \.OS). . 27 (77 ,3~~ 114 (92, 'o) Porcentaje de
evocacin en
35 (100, %) 124 (1 00, (.) 1980 1990 Saldo la categor(a
Obreros en la fabricacin
(AP P3) ......... . 69,4 52 -17,4 -25
La prdida es de 89 empleos, es decir , el 71 por Obreros profesionales
ciento de los empleos iniciales.
(P2 PI ET) .. . . . . . 15,8 17 ,1 + 1,3 + 8,2
Contramaestres . . . . . 4,9 4,1 - 0,8 -16,0
En Le Mans, el mecanizado de los porte fuses R9 Tcnicos ... ... . . . . 4,6 5,3 + 0 ,7 +15 ,1
se efecta -en cantidad de produccin igual- con Empleados . .. .. .. .. 3,95 3,0 - 0,95 -24,0
una disminucin del personal de cerca del 40 por Ingenieros ... . . .... 1,25 1,3 + 0,05 + 4,0
ciento. En una forja de las Ardennes, la automatizacin 100,0 82,8 -17,2
ha hecho disminuir los efectivos en un 52 por ciento.
Estas cifras, por muy impresionantes que sean, estn,
Fuente: citado por D. Richter (34) .
sin embargo, corroboradas por las que pone de mani-
fiesto la firma Hitachi. A raz de una encuesta llevada
a cabo en 106 talleres, Hitachi afrrma que las reduccio-
nes de plantillas oscilan entre un 40 y un 70 por
ciento, segn los tipos de funcin planteados. D. Richter, que menciona estas cifras (34), las co-
menta brevemente indicando sus tendencias principa-
les: "De 100 personas que trabajan en la fabricacin
Una evaluacin ms global en el ao 1980, en el afio 1990 slo permanecern el
82,8 por ciento. La poblacin de obreros de produc-
Si damos un paso adelante dispondremos de algu- cin, (oficiales de 3 2 y especialistas) disminuira en
nas estimaciones. En lo que se refiere a la industria una cuarta parte, mientras que los tcnicos, los obre-
del automvil sobre todo, la Renault ha hecho pbli- ros cualificados y; en una mayor medida, los inge-
ca una prospectiva para el conjunto del grupo. El nieros, aumentaran respectivamente en un 15,1 por
planteamiento no deja de ser un tanto particular en la ciento, un 8,2 por ciento y un 4 por ciento. Correla-
medida en que estn agrupados todos los empleos del tivamente los empleados evolucionaran en las mismas
156 157
proporciones que los obreros de fabricacin y los con- grupo o de una rama se multiplican si se aborda el
tramaestres en una pendiente un poco menos abrupta, campo macro~conmico en s.
menos 16 por ciento". D. Richter afirma, igualmente,
que segn el autor de estas estimaciones "entre los
20.000 emigrantes de la Renult, la mitad se ira y se- 3. El campo incierto de las proyecciones
ran reemplazados por ''jvenes con potenciales" sus- macro-econmicas
ceptibles de adaptarse a las nuevas tecnologas. La do-
ble referencia a los ''emigrantes" y a los "jvenes con A nivel macro~conmico propiamente dicho, algu-
potenciales'' viene a recordatque no slo estn en nas cifras se han convertido rpidamente en clsicas y
juego unas modificaciones de volmen .global; e~1 la han sido, por supuesto, fuertemente discutidas.
misma proporcin se juega el mismsimo futuro de Segn un informe publicado por la Documentation
ciertas categoras sociales en el serto de los volmenes. fran~aise (29), "las supresiones potenciilies de puestos;'
Una ultima precisin: las estimaciones del. esquema en el horizonte de 1985 directamente ligadas a la au-
arriba detallado han sido elaboradas en produccin tomatizacin, se eleveran a 4.000 debido a la difusin
constante; una tasa de crecimiento del 1O al 20 por de las MHMN; a 50.000 por el hecho de los robots y
ciento en .el mismo perodo (es decir, del 1 al 2 por de los autmatas de gran serie; y a 50.000 ms debido
ciento por ao), no cambara de manera significativa a los ordenadores de procesos ... Se podra alargar esta
este estado de cosas. lista. Sobre este punto, O. Pastr (30) menciona unos
Aun si las observaciones disponibles en la actuali- argumentos y unos contra-argumentos que pueden ser
dad parecen corroborar en sus grandes lneas estas intercambiados. El lector, preocupado por entrar ms
precisiones, es difcil afirmar que todo ello es debido profundamente en esta discusin encontrar en ellos
a la automatizacin. Entre las preguntas que subsisten, unas referencias muy tiles.
es ciertamente pertinente interrogarse sobre cul es la En lugar de discutir estas cifras, una por una, (no
parte de estas disminuciones a la cual la empresa tienen ms valor que el de ser unos indicadores muy
hubiera estado tentada de proceder en todos los casos generales), parece ms til intentar elaborar una eva-
y cual es la parte imputable a la automatizacin. De luacin ms cualitativa de las cosas. Desde este punto
manera ms profunda todava, cul es la parte que se de vista, la pregunta clave que determina la evolucin
puede atribuir a los nuevos materiales en relacin a la ms probable sigue siendo la de la productividad y su
que es imputable a la simplificacin de las piezas, de evolucin. Sin embargo, la hiptesis de un aumento
los modelos o a las nuevas tcnicas de estandartizacin de la productividad provocado por la automatizacin,
a la que, de todas formas, la industria est procedien- no impide las indecisiones y las dificultades de la pre-
do? visin. El esquema siguiente, tomado de un estudio
Las preguntas que se pueden plantear a nivel de un del CEPREMAP; tiene el gran mrito de indicar cmo
una misma hiptesis de aumento de la productividad
158 159
Circuito IV Efecto sobre el beneficio y la inversin :
LOS EFECTOS MULTIPLES Y efecto correctivo en relacin al efecto
CONTRADICTORIOS DE LA PRODUCTIVIDAD anterior.
SOBRE EL EMPLEO
Las indicaciones (-) o (+) corresponden a los signos
de la derivada parcial de cada variable, en relacin a la
Precio a la Competitividad + Exportaciones que le precede, siguiendo el sentido de la flecha en el
produccin . esquema.
M.N.- El tomar en cuenta el carcter endgeno de los
salarios introducira, adems, dos efectos opuestos;
uno de demanda y el otro de competitividad.
~....-In_v_e_rs_i__n_'. .....~+
nes perfectamente dispares, segn las caractersticas
- +-i~..._c_o_n_s_u_m_o___. de los encuadramientos macro-econmicos que se de-
sarrollan en la economa.
164 165
(6). BJOERKMAN et al., Work Relation, Capital en Etat des sciences et techniques, La Dcouverte-
Accumulation & Technical charge, citado en Ernst Maspero, 1983.
D. (17). DANIELLOU F., L.impact des technologies
(7). BOUCHUT Y., "Classifica tion des robots indus- nouvelles sur le travail en postes dans /'industrie
triels et politique d'innovation, de production et de automobile, CNAM, Pars, 1982.
diffusion de ces matriels", in Etat de la robo tique, (18). EMERY F.E., La ligne de montage, su logique
t. 2. AFRIHERMES ADI, 1982. et son avenir, Document ANACT, 197 5.
(8).BOUCHETY.,DUFOURD.,JACOTH.,RUFFIER (19). ENGELBERGER F., Les Robots industriels,
J., Automatisation. Formes anciennes et Formes Hermes Publishing, 1981.
nouvelles, PUL, 1980. (2)). ERNST D., Restructuring V orld Industry in
(9). BOYER R., MISTRAL., Accumulation, injlation, Period of Crisis -An analysis ofRecent Developmets
crises, PUF, segunda edicin 1983. in the Semi Conductor lndustry, UNIDO/IS 285,
(1 0). BUSSON A., LEROUX D., Annuaire de la 1981.
robotiqu~ en France, Hermes Publications, 1982. (21 ). GEZE F., "Automatisation, productivit, emp1oi:
(11 ). BUTLER J., "Flexibilit de production et renta- quelques rflexions sur le cas japonais", in ADEFI.
bilit des investissements" ,prxima publicacin en (22). GINSBOURGER F., Introduction d un dbat
Revue d'conomie industrielle, 1983. sur l'automatisation, Informe STRAIS, mayo 1980 .
. ( 12). CAIRE G., "Automatisation: technologie, travail, (23). GONENC R., LECLER Y., l'Electronisation
relations sociales)) in ADEFI industrielle au Japon, Centre de recherches sur le
(13). CEPII, "Marchs, technologies et nouvelles rela-
Japon contemporain, cahier nm. 2, 1983.
tions intetnationales", Eco nomica, 1983. (24). LASFARGUE Y., "L'utilisation de la robotique
(14). COMMISSARIAT AU PLAN "Bilan de l'auto-
dans la production et ses perspectives d'avenir. Avis
matisation et de l'informatisation", Rapport du et Rapport du CES" Journail officiel, 2 .avril 1982.
GSI, nm. 2, 1983. (25). LE QUEMENT J., Les Robots - enjeux cono-
(15). CORIAT B., "Ouvriers et Automates ", in Figures miques et socillux, Documentation fran9aise, 1981-
du nouvel ordre productif, Maspero 19~0. "Robots "De la Dpendance a l'autonomie technoligique",
et auto mates dans les industries de srie", in ADEFI, in CESTA.
1981 a. "L'Atelier fordien automatis" in revue (26). LEROUX F., Les Robots. Stratgie industrielle,
NON!, Reperes pour le socilllisme, Non, dc. 1981 Ed. Herms, 1982.
b. L 'Atelier et le Chronometre, Bourgois, 2 ed. (27). LINHART R., "Proces de travail et division de
revue, 1982. la classe ouvriere", in Division du travail, colloque
(16). CORIAT B., LECLER Y.,"Robotique et emploi de Doudan, d., Galile, 1978.
industrie!: .le cas japonais", prxima publicacin (28). OCDE, L 'incidence des quipements industriels
166 167
automatiss sur les industries manufacturieres des (41). T~URU S., "Progres techniqueetemploi,l'intro-
pays membres, 1982. ductlon des robots au Japon, in CEPII, 1983
(29). PASTRE 0 ., MEYER D., TRUEL J.-L.,
ZARADER R., lnformatisation et emploi, menace
ou mutation, Documentation fran~aise, 1981. Una bibliografa selectiva y accesible
(30). PASTRE 0., L 1nformatisation et l'Emploi, La
Dcouverte/Maspero, 1983. En primer lugar, dos obras clsicas. Por orden de
(31 ). PIORE M., SABEL Ch., ltalian Small Business publicacin:
Development: Lessons for US Policy, MIT Paper,
1981. LEQUEMENT Joel, Les Robots, Enjeux conomiques
(32). Rapport de la Mission robotique, Ministere de la et sociaux. Se trata del primer libro sobre el tema
Recherche et de la Technologie, 1982. en francs. Es un trabajo muy documentado, com-
(33). REGlE NATIONALE DES USINES RENAULT, pleto, con numerosas ilustraciones y esquemas. Es
"La Robotique a la Rgie Renault", in Bulletin el clsico nmero 1, el trabajo de referencia. Sin
technique de la RNUR, nm. 41, 1979. embargo, hay que recalcar que en l la opinin do-
(34). RICHTER D., Travail et progres technique dans minante es la de los constructores con respecto a la
/'industrie automobile, L 'exemple Renault, Doc. de los usuarios.
CFDT, Flins, 1982. LASFARGUES Yves, L'utilisation de la robotique
(35). RICHTER D., "L'Automatisation a la Regie dans la production y ses perspectives d'avenir. Avis
Renault", in Le Travail ouvrier, Cahier fran~aise, et rapport du CES. Journal Officiel, 2 avril, 1982.
Documentation fran~aise, 1983. Se trata de un informe oficial. Abarca ms breve-
(36). SADAMOTO K., Robots in the Japanese Econo- mente un campo ms amplio que el trabajo de
my, Survey Japon, Tokyo, 1980. Lequement, ya que trata de la robtica propiamen-
(37). SAUVY A., La Machine et le ch6mage, d. Du- te dicha, de 1~ automatizacin en los procesos, de
nod, 1980. la CAO, de la mformtica de gestin ... Es el clsico
(38). SHAIKEN H., Computer technology and the nmero 2.
Relations of Power in the Vork Place, IIVG Paper, Podramos aadir:
Berln, 1980.
(39). SOHN-RETHEL, Lavoro intelletuale e lavoro ADEFI, Les mutations technologiques, ed. Econmi-
manuale, Feltrinelli, 1977. ca 1981. Menos conocido, este trabajo es un poco
(4)). TRAVAIL, revista editada por el ERTO, nm. ms tcnico. Contiene numerosos artculos sobre
2-3, informe "Dix-huit mois de conflits la chaine" distintos aspectos de la automatizacin.
AEROT, 26 bd Richard-Lenoir, 75011 Pars. ' BIT, (Bureat. international du travail) L 'impact des
nouvelles technologies emploi et milieu de travai/
168 169
BIT. Geneve 1982. Trabajo un poco especializado
pero muy til por dos razones : contiene numerosas
comparaciones internacionales; reproduce una gran
cantidad de documentos (artculos de peridicos y
de revistas) insistiendo en las posiciones sindicales
Y en los acuerdos establecidos en diferentes pases
relacionados con la introduccin de las nuevas tec-
nologas.
BOUCHUT et al., Formes anciennes et nouvelles d'au-
tomatisation, PUL 1980. Una lectura del debate
terico que ha proporcionado y continua propor-
cionando la matriz de interpretacin global de los
autores que defienden la tesis de la revolucin cien-
tfica y tcnica (en las revistas la Pense, Issues .. .).
CORIAT B., L 'Atelier et le chronometre (el taller y el
cronmetro), publicado en espaol, ed. Siglo XXI.
El hermano mayor de este libro, sobre robtica,
lndice
que es su lgica continuacin.
PASTRE 0., L Tnformation et l'emploi coll. Repres.
La Dcouverte/Maspero 1983. Una presentacin de -Presentacin ............................. 5
conjunto de los fenmenos de informacin. Contie- -Introduccin. Los robots estn entre nosotros ... 13
ne una "requisitoria para una polt:a social" que
acompaar su difusin. PRIMERA PARTE
Varias revistas han consagrado a la robtica sus EL ROBOT Y SUS UTILIZACIONES .......... . 21
informes:
- Industriet et Techniques, Le Nouvel Automa- -Manipuladores y mquinas-herramienta . ....... 25
risme, Usine nouvelle (plusieurs numros spciaux); . Los manipuladores .... . ................. 26
- Critique de l'conomie politique, nm. 22 - . Autmatas programables y calculadores ...... 28
Issues, nm. 16- La pense, nov.-dec., 1981- Termi- . . Las mquinas-herramientas programables ..... 32
na/1984 nm. 12, Travail, nm. 2-3, spcial automo-
bile, 1983, et nm. 5 ( paraitre 1984, spcial roboti- -El concepto de robot . ..................... 35
que). . Algunas definiciones .................. . .. 3 5
. Los diferentes tipos de robots ...... ... .... .42
170
-Las tendencias de la robtica . . ... .......... .47 - Una nueva economz'a del tiempo ............. 95
. La "Universalidad" .............. . ..... . .48 . La automatizacin de simple "sustitucin" .... 96
. La modularidad ........................ .49 . La fabricacin asistida por calculadores . .. .... 99
. . ..................... 50
. El apren dIZaJe
- Talleres y empresas flexibles . ............. . 107
SEGUNDA PARTE . El significado econmico de la flexibilidad ... 108
. La flexibilidad de la empresa de serie,
LA DIFUSION DE LA ROBOTICA ............ 55 pequea y media ....................... 113
. La empresa flexible y la crisis ...... . ...... 116
- A nivel mundial -
La denominacin americano-japonesa . ........ 57 CUARTAPARTE
. El parque instalado .. .... ........ .... . ... 57
. Una difusin fuertemente jerarquizada ....... 59 EL TRABAJO Y EL EMPLEO
REDISTRIBUIDOS ........................ 119
-La robtica en el Japn . .......... . ..... ... 67 -Mutaciones en las cualificaciones . ........... 121
. Los automatistas en la dcada de los 70 . Las nuevas imposiciones de rentabilizacin
en el Japn ............................ 68 de las instalaciones ........... . ......... 122
. Las condiciones sociales favorables ......... .70 . La recomposicin de la plantilla del empleo .. 127
. Existen lmites? .. . ............... ..... .73
-La robtica en Francia ... ..... ............. 75 -La divisin del trabajo . ................... 139
. Una industria confrontada a un desafo . Los lderes jerrquicos y escalas
difcil ........................... .. ... 7 5 de promocin ......................... 140
. El caso Ranault ...... ........ . . . .. . . .. . .79 . Exclusin e integracin:
el papel clave de la formacin .... ......... 143
TERCERA PARTE
-El empleo ................. . ... ... .. ... 149
NUEVAS FORMAS DE AUTOMATIZACION .... 85 . La gran diversidad de parmetros .......... 150
. Industrias fabriles: un saldo negativo ....... .155
-El cronmeto y el reloj . . . . . ..... . ... .. ... .87 . El campo incierto de las proyecciones
. Los principios constituyentes de la OCT ..... .88 macro-econmicas ............... . . . .... 159
. Los lmites de la OCT ... .. ....... ........ 90
. Unas considerables mejoras potenciales de - Conclusiones ........................... 163
productividad .......................... 92
- Bibliografz'a .... ... .. ...... . . ......... .. 165
De Franco a Juan Carlos 1 (El Movimiento Comunista en la transicin
poltica 1975-1979).
2 Aspectos de poltica exterior de la URSS. Martin Landa.
3 La Comu na de Pars. Marx-Engels-Lenin.
4 La Revolucin Nicaragense. Presentacin y seleccin Empar Pineda.
5 La Segunda Repblica: reforma, fascismo y revolucin . Ernesto Portuondo.
6 Revolucin socialista e idealismo de Gramsci. Jos Ignacio Lacas/a.
7 La teora de la transicin al comunismo en Mao Tsetung. (1949-1969). Euge-
nio del Rio.
8 La alternativa militar. El go lpi smo despus de Franco. Jos Luis Morales
y Juan Celada.
9 Argentina. Cmo matar la cultura. A.I.D.A . A. Adellach y N. Aguirre,
O. Cal, 11 Colambres, J. Cortzar, P. Chreau, M. A. Estrella, C. A.
Cabello, E. Galeano, J. Gelman, T. Gubitsch, A. 'nouchkine, A. E. Pao-
lelli, F. Solanas, Medrcedes Sosa, A. Szpunberg y V. Zito Lema.
10 Actas Tupamaras . Los Tupumuros.
"! 1 El Salvador. La largaa lucha de un pueblo (1932-82). Antonio A lvurez-
So/is, Maria Lpez Vigi/, Jos Luis Morales y textos seleccionados.
12 Polonia. Por qu luchan los obreros. Pere Jdar Martinez-Andreu Lope
Pea.
13 La razn de la fue rza . La amenaza de la guerra en Europa. Poltca revo-
lucionaria y violencia en Occidente. Ejrcito y poltica en el Estado espa-
ol. . Eugenio del Rio.
14 Escr ito en Euskad i. Revolucin y cultura. A lfonso Sastre.
15 Guatemala. Un pueblo en lucha . Colaboracin de Eduardo Galeano. An-
tonio Campos-Jos Gonzlez.
16 El Movimiento de los No Alienados. Historia y doctrina. Luis Moita.
17 La guerrilla antifranquista. 1945-1949. Rafael Gmez Parra.
18 Cristal del tiempo 1933-1983 . Jos Bergamin.
19 Marxismo, hoy. James Petras. Paul M. Sweezy, Ernest Mande/, Juan Ra-
mn Cupe/la y Teodor Shunin.
20 Capitalismo, socia lismo y crisis mundial. James Petras.
21 Dentro y fuera de la ballena. George Orwe/1, E. P. Thompson, Jonah Ras-
k in y J. Ignacio Lacas/a.
22 Nicaragua, valientemente libre . Contiene entrevista "con Toms Borge.
losu Perales.
23 La Robtica . Benjamn Coriat.
Coleccin Nuestra Lucha.
Ocho meses de lucha de los trabajadores de Nervacero. Por qu ocupa-
mos el Parlamento Vasco.
2 Un curso de lu cha estudiantil. Daniel Soutullo, Juan Celada y Yolanda
Carda.
3 Marinaleda. Huelga de hambre contra el hambre . Candi Marfnez y Go-
dojredo Camacho.
4 Tortura y Sociedad . Jus10 de la Cueva, Jos Luis Morales, Grupo de m-
dicos contra la tortura, Eva Forest . laki Muagorri, Begoa Carmen-
dio, Alfonso Sastrem, Fernndo Savaler, Jos Morfa Rodrfguez Erdozain,
Juan Maria Bandrs, Alvaro Reizabal y Joseba Alxotegi.
5 Antologa de la libertad. Carlos Alvarez, Luis Eduardo A lile, Jos Berga-
mfn, Ignacio Colambres, Ricardo Carpani, Luis Carda Montero, Jos A.
Labordeta, Antonio Leyva, Rafael Lorente, Julin Marcos, Cristina Ma-
rislany, Jos Luis Muoz Lorente, Eduardo Roldn, Luis Sez, Juan Ma-
nuel Snchez Gordillo, Alfonso Sastre, Juan Carlos Senante, Juan Ma-
nuel Serral y Javier Villau.
6 Ms all del barro y las promesas. Asociacin de Familias de Rekaldeberri.
7 Represin, tortura y gobierno PSOE. laki Muagorri, Javier Sdaba, Eva
Foresl, Xabier Amuriza, laki Esnaola Salhaketa, Francesc Arnau i Arias,
Rosa Olivares y Gonzalo Martfnez-Fresneda.
8 La tropa atropellada. El servicio militar hoy . Antonio Pereda.
Literatura.
Los das de la Selva. Mario Payeras.
2 Bloque H. Balada de un combatiente del IRA . Roger Faligot.