Mallorca es una isla bellsima que goza del sol mediterrneo suavizado por la

brisa fresca del mar. Las playas de arena blanca y aguas cristalinas atraen a
viajeros de todo el mundo.

Con 3.640 kilmetros cuadrados Mallorca es la isla ms extensa del

archipilago balear. Su temperatura media anual de 17,6 grados,
sus 2.400 horas de sol al ao, y sus playas y calas de aguas
cristalinas con destellos de color esmeralda son una combinacin
irresistible para los turistas. De ah que en las ltimas dcadas
Mallorca se haya convertido en uno de los destinos ms apreciados
de todo el mundo, y que en verano el aeropuerto de Palma sea uno
de los ms transitados de Europa.
Aunque habitada al menos desde el ao 4.000 a.C. y fecundada por
numerosas civilizaciones cartagineses, romanos, vndalos,
bizantinos, musulmanes..., el momento estelar de la isla no lleg
hasta el siglo XIII, cuando el rey aragons Jaime I el Conquistador
se la arrebat a los moros (1229) y fund a continuacin el reino de
Mallorca. ste perdera su independencia un siglo ms tarde, en
1343, al ser anexionada Mallorca a la corona de Aragn por Pedro
IV, pero ello no mermara un pice la prosperidad de la isla; antes al
contrario supuso la posibilidad de extender a Npoles y Sicilia el
rea de influencia de su potente marina mercante, que ya abarcaba
desde los pases africanos hasta los de la Europa nrdica.
Me pareci la ciudad ms hermosa que Nos hayamos visto,
escribi Jaime I poco despus de contemplar por primera vez la
entonces llamada Ciutat de Mallorca, seora de una amplia baha
rodeada de arboladas colinas. Palma, hoy capital de la isla y de la
Comunidad Autnoma Balear, conserva de aquellos aos de
esplendor un recuerdo indeleble en los monumentos situados en el
barrio de la catedral.
Tambin monumental es la zona que cae al oeste del Born, rambla
que constituye el centro vital de la ciudad. Visitando ambas reas,
ms algunos otros lugares de inters fuera del centro, se obtendr
una imagen bastante fiel y completa de Palma.
En Mallorca hay tres zonas geogrficas bien diferenciadas: el Pla,
una seca llanura central ajena al turismo, en la que se cultivan
cereales, almendros e higueras, y que est salpicada de curiosos
molinos de viento de aspas metlicas que extraen el agua del
subsuelo; la sierra de Tramuntana, que eleva sus crestas calcreas
paralelamente a la costa norte, culminando en el Puig Mayor (1.445
metros), y la abrupta costa de Levante, en la que la erosin ha
formado innumerables calas de arena fina y espectaculares
cuevas.
A pesar del desarrollo turstico muy acusado en estas dos ltimas
zonas, ms del 40% de la isla est protegido para preservar su
prodigiosa naturaleza y muchos de sus enclaves slo son accesibles
a travs de viejos caminos, lo que hace de Mallorca un escenario
ideal para el senderismo.
Barrio de la Catedral
Alrededor de tres horas puede llevar la visita a esta zona de Palma,
la ms antigua de la ciudad, cuyos principales hitos monumentales
son:
La catedral, uno de los mejores exponentes del gtico
mediterrneo, comenz a construirse a principios del siglo XIV en el
solar que ocupaba la mezquita y no se termin hasta el siglo XIX. Su
majestuosa silueta, en la que alternan contrafuertes y pinculos, se
divisa desde cualquier parte de la ciudad. La piedra calcrea de
Santany, de la que est hecha, sorprende por las diversas
tonalidades que adquiere a lo largo del da: ocre, dorada, rosa
Maravilla por su gran amplitud 110 metros de longitud y 40 de
anchura, as como por sus tres portadas. La del Mirador, situada
frente al mar, conserva la fina decoracin del siglo XV, obra maestra
del mallorqun Guillem Sagrera. En el interior se contemplan
algunas innovaciones que introdujo Antoni Gaud, como los
candelabros y el enorme baldaquino. Imprescindible la capilla de
Miguel Barcel, elaborada en arcilla, y aplaudida por unos y
denostada por otros.
Cerca de la catedral est uno de los museos ms importantes de la
ciudad, el Es Baluard Museo de Arte Moderno y Contemporneo
de Palma, llamado as por situarse en el baluarte de Sant Pere. El
centro cultural rene pinturas y esculturas de artistas de finales del
siglo XIX y del siglo XX como Cezanne, Gauguin, Picasso, Mir o
Barcel, y cuenta con exposiciones temporales y una magnfica
terraza con vistas al Paseo Martimo.
Palacio de la Almudaina. Antigua fortaleza de los wales rabes,
fue muy restaurada en los siglos XIV y XV para servir de palacio a los
reyes de Mallorca. Destacan la torre de lngel, el saln gtico del
Tinell y la capilla de Santa Ana, uno de los pocos ejemplos del
romnico balear.
La iglesia de Sant Francesc, que alberga un bellsimo claustro
gtico (siglo XIII) y la tumba del mallorqun Ramn Llull (1235-1315),
humanista que lleg a ser un gran filsofo, telogo, alquimista y
escritor en cataln.
Tambin estn por aqu la iglesia de Santa Eullia (siglo XIV), los
baos rabes, el Museu de Mallorca, el Museu Dioces y la casa
Marqus del Palmer (1556), buena muestra de la arquitectura
seorial palmesana.
Al oeste del Born
Una hora puede suponer el recorrido por esta zona en la que
sobresalen:
La Llonja. Bolsa de mercaderes construida en el siglo XV segn el
proyecto de Guillem Sagrera, est considerada como la obra
maestra del gtico civil espaol. Inolvidable la imagen de los nervios
de las bvedas arrancando, a modo de palmeras, de seis airosas
columnas helicoidales.
Antiguo Consulado del Mar. Edificado en siglo XVII y decorado
con una gran galera renacentista, antao fue sede del Tribunal de
Comercio Martimo y hoy es la sede de la Consejera de Presidencia
del gobierno de las Islas Baleares.
Palacio Solleric (siglo XVIII). Magnfica fachada con galera que da
a pleno Passeig des Born y magnfico patio, el ms seorial de la
ciudad.
En torno a Palma
Castillo de Bellver. Esta residencia veraniega de los reyes de
Mallorca, construida en el siglo XIV, fue pronto transformada en
crcel, cometido para el que estuvo reservada hasta 1915,
acogiendo a prisioneros tan ilustres como Jovellanos. Llaman
poderosamente la atencin su planta circular, su hermosa plaza de
armas y su gran torre del homenaje. Desde su terraza se obtiene una
de las mejores panormicas de la baha de Palma.
Fundacin Pilar i Joan Mir. A 5 kilmetros al sudoeste del centro
de Palma, se alza este edificio de Rafael Moneo, donde se exponen
de forma rotativa obras donadas por el pintor, grabador, escultor,
ceramista y escengrafo nacido en Barcelona (1893) y fallecido en
Mallorca (1983).
Sierra de Tramuntana
La de Tramuntana es una sierra afilada, de barrancos vertiginosos,
espesos encinares, bravas laderas pinariegas y cumbres luminosas
que huelen a romero; una sierra que bordea la costa noroccidental
de la isla a lo largo de cien kilmetros, desde la isla Dragonera hasta
el cabo Formentor, y que tiene su mxima altura en el Puig Major, a
1.445 metros sobre el mar.
Para recorrerla en coche, conviene comenzar en Andratx, tomando
la carretera superpanormica C-710 hacia Estellencs y siguiendo
hacia Banyalbufar. Poco antes de llegar a esta localidad de casas de
piedra escalonadas entre olivares y viedos de malvasa, se
encuentra Sa Talaia de Ses Animes, una antigua torre de vigilancia
desde la que se domina un paisaje costero grandioso, desde la isla
de Dragonera hasta Port de Sller.
La siguiente parada es en Valdemossa, pueblo pulcro y encantador
de casas de rubia piedra caliza, como las montaas que lo rodean;
casas que se acurrucan junto a la famosa Cartuja donde el
compositor Chopin y su amante, la escritora y periodista francesa
George Sand, pasaron el invierno de 1838.
Chopin compuso en la Cartuja los Preludios Op. 28 y una Polonesa ,
la segunda Balada y el tercer Scherzo, y George Sand relat su viaje
en Un invierno en Mallorca, donde criticaba, con abuso de los
tpicos, las costumbres de los payeses y de la sociedad insular de
aquel tiempo. Si se propona o no desairar a los mallorquines, lo
cierto es que el libro ha contribuido a forjar el mito del exotismo de
la isla y dar a conocer en todo el mundo esta hermosa localidad.
La celda n 4 del monasterio, en la que se hospedaron los viajeros,
est adornada con el piano Pleyel, trado desde Pars, en el que el
msico polaco compuso sus obras mallorquinas.
Ms adelante, se hallan Son Marroig, palacio que perteneci al
archiduque Luis Salvador de Austria, con un templete de mrmol de
Carrara desde el que es un placer otear al atardecer la roca
Foradada, y Dei, pueblecito de casas rojizas que se apian unas
sobre otras en la empinada ladera y tradicional refugio de artistas,
empezando por Robert Graves (1895-1985), que yace en su precioso
cementerio.
Hermosos son tambin los conjuntos urbanos de Sller y Port de
Sller, comunicados ambos por un simptico tranva que data de
1913. Los ltimos hitos de la ruta son la carretera de Sa Calobra,
una va espectacular que desciende 900 metros en slo 14
kilmetros, el monasterio de Lluc, donde se guarda la venerada
Virgen morena, Pollena que destaca por su Calvari y por su vida
artstica y Formentor, promontorio acantilado del extremo
septentrional mallorqun que es un puro mirador.
Cuevas de Levante
Mallorca es clebre por sus cuevas, formadas en las rocas de caliza
de la isla. Su peculiaridad suscita el inters del turista, que se ve
profundamente sorprendido por los lagos subterrneos que fluyen
por muchas de ellas. Por su especial inters destacamos las
siguientes:
Coves dArt. En este fabuloso decorado subterrneo destacan la
Reina de las Columnas, de 22 metros de alto, y la sala de las
Banderas, de 45.
Coves del Drach. Cuatro salas, unidas entre s por estrechos
pasillos y cuajadas de concreciones, se extienden a lo largo de ms
de 2 kilmetros. La joya es el lago Martel, de 177 metros de largo y
admirable transparencia.
Senderismo
La sierra de Tramuntana, con sus acantilados de ms de mil metros
y sus barrancos transversales, es un paraso reservado para los
amigos de los senderos. El ms espectacular es el camino del
Archiduque, una senda majestuosa, una magna obra peatonal que
fue concebida a finales del siglo XIX por el archiduque Luis Salvador
para poder pasearse contemplando a vista de pjaro sus muchas
posesiones a uno y otro lado de la sierra. Especialmente bello es el
tramo que asciende desde Valldemossa al mirador de Ses Puntes y
al puig Caragol, ofrecindose poco antes de ste la posibilidad de
bajar a Dei por los escarpadsimos Cingles de Son Rullan. Son tres
horas y media (slo ida) de camino sealizado con marcas de
pintura rosa, con un desnivel de 600 metros y una dificultad media-
alta.
Otro lugar paradisiaco que exige botas de montaa es el torrent de
Pareis, el cual ha excavado al lado del pequeo pueblo de Sa
Calobra una estrecha garganta caliza, obstruida en su
desembocadura por una playa de cantos blancos que baa un agua
pursima. El lecho del ro es accesible por un camino de 200 metros
que atraviesa dos galeras subterrneas, pero para apreciar su
encajonamiento hay que remontarlo unos 4 kilmetros. Son cinco
horas (ida y vuelta) con varios vados y trepadas. Dificultad: alta.
Playas de Mallorca
Mallorca es un destino turstico querido y soado por el viajero, que
aora sus paradisacas y cristalinas playas. La isla tiene cerca de 80,
tan diversas como distintos son los turistas que eligen esta isla para
descansar.
Sa Calobra. Ya la hemos mencionado anteriormente, pero no
poda faltar en un apartado dedicado en exclusividad a las playas
mallorquinas por su belleza y espectacularidad. La cala Sa Calobra
est situada en el municipio de Escorca, declarada Monumento
Natural. Su limpia y transparente agua est rodeada de acantilados
que superan los 200 metros de altura.
Cala Varques. El viajero que decida visitar este rincn, en el
municipio de Manacor, se encontrar con una de las calas naturales
ms vrgenes de Mallorca, con una longitud de 70 metros.
Cala Mondrag. En el Parque Natural de Mondrag, al sureste de
la isla, est la cala del mismo nombre, de una belleza
sobrecogedora. El entorno se caracteriza por los acantilados y
vegetacin de pino, matorral y cultivo tradicional.
Cala Formentor. Localizada frente a la isla de Formentor, su
arenal tiene una longitud kilomtrica y un grano finsimo y color
blanco luminoso. La playa est protegida por un frondoso y tupido
bosque de pinos y encinas, que hace an ms paradisiaco este
ensoador litoral.
Es Trenc. Los baistas locales y turistas abarrotan esta playa, el
ltimo gran arenal sin urbanizar y bien conservado en Mallorca. Su
fina y blanca arena, y sus cristalinas aguas hacen disfrutar al viajero
que se acerca a sumergirse en este paraso terrenal.