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La Colonia en nuestro pas estuvo marcada por la presencia de los

pregoneros, quienes anunciaban sus productos con cantos meldicos,


versos o frases.
Hoy los conocemos gracias al acuarelista Pancho Fierro y al escritor
Ricardo Palma, que los retrataron y describieron en sus obras. Los ms
conocidos fueron:
La lechera
Ya no se consultaba el reloj pues el pregn de la lechera indicaba que ya
eran las 6:00 de la maana: Leche purita... leche sabrosa de la barrosa
de la vaquita. Leche bien especita, rica y purita!.
La tisanera
A las 7:00 de la maana, la tisanera, que venda infusiones de hierbas,
empezaba su cntico: La tisanera se va...Tizana con nieve.
El bizcochero
Los bizcocheros, que salan a las 8:00 de la maana, ofrecan sus panes
as: Lleg el pan de dulce, cosa buena!
El sanguito de aju
A las 9:00 en punto se escuchaba: Lleg el sanguito casera, aqu tiene
el rico y calientito sanguito.
La tamalera
Todos los das a las 10:00 de la maana aparecan los tamaleros
gritando: Tamales! Tamales! Ya se van los tamalitos calientitos!.
La picaronera
A las 2:00 de la tarde, se escuchaba a los lejos el cntico de la
picaronera: Aqu estn los pcaros calientitos. Picarones redondos y
tostaditos y en su miel bien baaditos!.
La turronera
A las 3:00 de la tarde se escuchaba por las calles de Lima Turrones!
Turrones! Los ms sabrosos turrones!.
El sereno
El sereno del barrio sala a las 10:00 de la noche en punto anunciando:
Ave Mara pursima las 10:00 han dado. Viva el Per y sereno!.
Definitivamente no es tan simptico como Steph o Nate. Pero me llama ms la atencin. Tiene
algo

que hace que me cueste apartar la vista de su rostro. Apenas soy consciente
de que Noah me est

observando, hasta que por fin aparto la mirada y finjo que lo miraba porque
me haba quedado

pasmada.

Porque lo haca por eso, no?

Nos vemos, Tessa dice Nate, y los tres salen de la habitacin.

Dejo escapar un largo suspiro. Decir que los ltimos minutos han sido
incmodos es quedarse

corto.

Pediremos que te cambien de cuarto! ruge mi madre en cuanto la puerta


se cierra.

No, no puede ser suspiro. No pasa nada, mam. Hago todo lo que
puedo por ocultar mi

nerviosismo. No s si funcionar, pero lo ltimo que necesito es que la


controladora de mi madre me

monte una escena el primer da de universidad. Seguro que no pasa mucho


tiempo por aqu de

todos modos digo en un intento de convencerla, a ella y a m misma.

De eso, nada. Vamos a pedir el cambio ahora mismo. Su impoluto aspecto


contrasta con la

furia que refleja su rostro; lleva el pelo largo y rubio recogido sobre uno de sus
hombros, pero todos

sus rizos se mantienen perfectamente intactos. No vas a compartir


habitacin con alguien que deja

que entren los hombres de esa manera, y menos con esas pintas!

Me quedo mirando sus ojos grises, y despus miro a Noah.

Mam, por favor, esperemos a ver qu pasa. Por favor le ruego.

No quiero ni imaginarme el jaleo que se armara al intentar cambiarme de habitacin en el


ltimo

minuto. Y lo humillante que sera.


Mi madre echa un vistazo al cuarto de nuevo. Observa la decoracin del lado de Steph y
resopla

de manera teatral.

Est bien dice a regaadientes para mi sorpresa. Pero t y yo vamos a tener una
pequea

charla antes de que me marche.

Captulo 3

Una hora despus, tras las advertencias de mi madre sobre los peligros de las fiestas y los

estudiantes masculinos (usando un lenguaje que tanto a Noah como a m nos ha resultado
bastante

incmodo or de su boca), por fin se dispone a marcharse. Como de costumbre, me da un


abrazo

rpido y un beso, sale del cuarto e informa a Noah de que lo esperar en el coche.

Echar de menos tenerte por ah todos los das me dice l con ternura, y me estrecha
entre

sus brazos.

Inhalo su colonia, la que le regal dos Navidades seguidas, y suspiro. Parte de su intensa
esencia

se ha evaporado, y entonces me doy cuenta de que echar de menos esa fragancia y la


seguridad y la

familiaridad que me transmite, por mucho que me haya quejado de ella.

Yo tambin te echar de menos, pero hablaremos todos los das le prometo, y aprieto los

brazos alrededor de su torso y entierro la cabeza en su cuello. Ojal empezaras aqu este ao

tambin.

Noah mide slo unos centmetros ms que yo, pero me gusta que no sea mucho ms alto. Mi

madre sola bromear conmigo cuando era pequea y deca que un hombre crece dos
centmetros por

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