Lucha de Clases en Springfield
Lucha de Clases en Springfield
Lucha de Clases en Springfield
Durante al menos la mitad de los casi treinta aos que ha durado la serie en la televisin,
se ha dedicado a mandar intertextos o mensajes ocultos en sus gags que dejan claro que
los guionistas originales de esta serie eran asiduos seguidores de muchas teoras
Frankfurtianas. Podemos ver a Bart, por ejemplo, profundamente desilusionado al ver que
su filosofa y modo de vida fueron asimilados por la industria cultural (en la forma de un
vendedor de libros de autoayuda) que insta a todo el pueblo a seguir la filosofa bartiana.
Dicho y hecho, pero con el consumo en masa esta ideologa pierde sustento y sentido. El
anrquico has lo que quieras siempre que lo quieras es mal comprendido y traducido en
un absurdo caos urbano en un da de consumismo al estilo estadounidense. Ante la distopa,
la poblacin entera culpa a Bart de su fracaso. De la misma manera la industria cultural
asimila a productos como los Simpson, para vender rebelin a las masas, no obstante del
sentido original de la obra.
Justificacin: Pertenezco a una generacin que creci viendo Los Simpson. Si bien no
comprenda en su momento la complejidad de sus referencias y la profundidad de su crtica,
quiero creer que tanto a m como muchos ms influy para llevarnos a una visin un poco
ms crtica de la sociedad. Los Simpson fueron en su momento una de las mayores
rebeliones al imperio de las serias televisivas adoctrinantes y estandarizadas tan tpicas de
la industria cultural. Su xito estuvo en disfrazarse como otra seria ms de la industria, una
caricatura de la tpica familia estadounidense. Pero en cada estandarizacin, en cada chiste
clasista estaba el verdadero chiste de fondo, el que se burlaba de las expectativas de una
sociedad clase-mediera ignorante y mediocre, e invitaba al espectador ms suspicaz a
rerse amargamente con la serie de su propia desgracia: pero no era una risa violenta con el
espectador como lo son Tom y Daly: era una risa que invitaba a la reflexin y a la
autocrtica. Esta forma tan cifrada de criticar con acidez la hizo aceptable para la industria:
acompaada del enorme xito comercial que tuvo y an tiene este concepto.
Demostrar el valor cultural de los Simpson. Aqu me planteo mi gran pregunta, que no
creo dar por resuelta Hasta qu punto fueron los Simpson un estmulo a la formacin
crtica y conformacin ideolgica de sus espectadores?
Hiptesis: Los Simpson, con todo y su constante stira social, son otro (refinado)
producto de la industria cultural cuyo verdadero fin termina siendo menos revolucionario
de lo que aparenta. Se me ocurre pensar, para poner un ejemplo, en el episodio La Tierra
de Tom y Daly. Los nios Simpson, al principio del episodio, disfrutan como siempre de
la violencia sin sentido de los dibujos animados. No imaginan que sern ellos el blanco de
esa misma violencia cuando visiten la Tierra de Tom y Daly. Al final, esto ni siquiera les
molestar. Despus de ser casi asesinados por numerosos robots, concluyen que han sido
sus mejores vacaciones. Han asimilado tanto la violencia que les vende la industria cultural
que no les sorprende ser violentados, ni siquiera les molesta haber pagado por ello.
posibilidades que tenemos como individuos, y a hacerlo riendo porque no nos queda mayor
opcin.
Marco Terico: Utilizar conceptos e ideas de Horkheimer y Adorno para analizar a Los
Simpson como una obra de la industria cultural. Muchos de estos conceptos son la esencia
de gags y chistes recurrentes en la serie. Por ejemplo:
-El azar y la planificacin. Con frecuencia, sealan Adorno y Horkheimer, la industria
cultural vende al azar como la nueva va para el xito. Por esta razn, no se le insta al
consumidor a ser distinto de lo que es: la fortuna podr (o no) sonrerle independientemente
de sus logros o carencias como individuo. El chiste es recurrente en Los Simpson: desde el
mismo Homero que por casualidad se convierte en hroe al impedir una catstrofe nuclear
presionando un botn al azar, hasta Lisa que, de milagro, naci superdotada en medio de
una familia mediocre. Los pocos privilegios que ha conquistado la familia (bienes de
consumo en su mayora), en su mayora los gan en premios y/o concursos. El espectador
se re ante esta sosa fantasa, sin darse cuenta que as se valida la planificacin. Esta se
lleva a cabo no obstante se ridiculice el espejismo bajo el que se escuda: No hay azar que
nos vaya a sonrer algn da, eso lo sabemos y hacemos chistes al respecto. De todas formas
se sigue validando la dominacin.
-La violencia contra el espectador. Horkheimer y Adorno sealan que Si los dibujos
animados tienen otro efecto fuera del de acostumbrar los sentidos al nuevo ritmo, es el de
martillar en todos los cerebros la antigua verdad de que el maltrato continuo, el
quebrantamiento de toda resistencia individual es la condicin de vida en esta sociedad. El
pato Donald en los dibujos animados como los desdichados en la realidad reciben sus
puntapis a fin de que los espectadores se habiten a los suyos.1 Los Simpson, a diferencia
del pato Donald, nos acostumbran a algo mucho ms doloroso que un puntapi: Nos
acostumbran al dominio total del mercado.
No slo los lugares, tambin los personajes estn estandarizados. Todos representan el
ideal (fallido) del American Dream: An los extranjeros que, como Ap, anhelan formar
parte de esta sociedad de consumo de valores meramente materiales. Aunque para ello
tengan que renunciar a al menos una parte de sus valores tradicionales.
1
Horkheimer, M. and Adorno, T. (n.d.). El iluminismo como mistificacin de masas. 1st ed. p.12.
La ciudad misma de Springfield representa la estandarizacin de la metrpoli moderna. En
realidad el nombre Springfield es un chiste: Los creadores del programa lo eligieron
porque es el nombre ms comn entre las ciudades estadounidenses. La idea era crear un
pueblo cualquiera, comn y corriente. Springfields hay en todo el mundo. La tpica ciudad
con sus centros comerciales, sus minisupers, sus cines aztecas. Despojada de sentido
junto a sus habitantes cuya existencia gira en torno al consumo.
Para alcanzar mis conclusiones y para realizar el anlisis propuesto, no cuento ms que
con los conceptos ya expuestos en el marco terico, y con mi propia subjetividad. Sera
necesario ver detenidamente cada episodio, sin embargo se priorizarn aquellos con una
temtica ms propicia para los temas que desarrollo.
Estado del Arte: No encontr mucha bibliografa til. Existe, sin embargo, un libro sobre
los Simpson que aborda diversos temas filosficos
Irwin, W., Conard, M. and Skoble, A. (2001). Simpsons and Philosophy : The D'oh! of Homer. 1st
ed. Open Court Publishing Company.
Bibliografa:
Horkheimer, M. and Adorno, T. (n.d.). El iluminismo como mistificacin de masas. 1st ed. p.12.