Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en La Sociedad Rural PDF
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Y CONOCIMIENTO TRADICIONAL
EN LA SOCIEDAD RURAL
Entre el bien comn y la propiedad privada
BIODIVERSIDAD
Y CONOCIMIENTO TRADICIONAL
EN LA SOCIEDAD RURAL
Entre el bien comn y la propiedad privada
Mxico, 2006
Mxico, primera edicin, diciembre de 2006
Derechos reservados:
Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable
y la Soberana Alimentaria
Cmara de Diputados
LIX Legislatura/Congreso de la Unin
ISBN: 970-95143-7-7
Cuidado de la edicin
Fernando Cruz Bentez
Karina Ochoa
Formacin de interiores
mc editores
Diseo de la portada
Julin Villar Barranca
Integrantes
Dr. Hctor Robles Berlanga, Dr. Roberto Cruz Garza,
Mtra. Patricia Aguilar Mndez, Dr. Rafael Zavala Gmez del Campo,
Mtro. Roberto Rangel Nez, Ing. Publio Rbago Riquer, Mtra. Gabriela
Rangel Faz, Mtra. G. Margarita lvarez Lpez, MVZ Juan Ponce Salazar,
Mtro. Francisco Lpez Brcenas, Mtro. Luis Cruz Nieva, Mtro. dgar Rivero
Cob, Mtro. Samuel Pea Garza, Ing. Ricardo Gonzlez Crabes, Ing. Jess
Guzmn Flores, Lic. Carlos Menndez Gmiz, Mtra. Liza Covantes Torres,
Lic. Manuel Mayer Hernndez, Mtro. Daniel Meja Gmez, Ing. Alejandro
Cancino y Len, Mtra. Jazmn Barajas Santinelli, Mtra. Altynai Arias
Hernndez, Mtro. Francisco Solorza Luna, Mtra. Violeta Nez Rodrguez,
Lic. Vernica Lira Lpez, Lic. Gilda Rojano Montelongo, Lic. Ricardo Lpez
Nez, Patricia lvarez Macedo, Marco Antonio Blancarte Rosas, Leticia
Pacheco Belmar, Leticia Ramrez Adame, Mnica J. Ramrez Laija,
Alicia Salazar Cruz, Beatriz Snchez Hernndez.
AGRADECIMIENTO
Presentacin
El conocimiento tradicional:
un recuento
Luciano Concheiro Brquez* y Mara Tarro Garca**
Puede parecer pretencioso decir con Ernst Bloch que este libro sobre el cono-
cimiento tradicional intenta ser una suma de granos de arena de los grandes
sueos de una vida mejor. Pero, precisamente, al plantearnos esta investigacin
empezamos por preguntarnos por dnde va la esperanza, ms all de la cotidiana
confrontacin entre formas de ver el mundo, de apropiarse y de convivir con
nuestro entorno. Buscamos pasar del lugar comn de que todo lo presente
est cargado de memoria, para plantearnos una historia y un presente que,
a pesar del gran peso y sentido unidireccional que pretenden, contienen una
serie de rupturas y una acumulacin de sentidos y adelantos en los escenarios
de futuro que nos muestran que otro mundo diverso es posible.
Lo decimos con franqueza: a los que escribimos este libro nos conduce
un imperativo tico, algunos lo definen como rebelin, otros como com-
promiso, porque el tema que nos rene reconoce una memoria colectiva
que le da cuerpo al conocimiento tradicional, pero tambin encuentra una
responsabilidad asumida que les merece a esas comunidades de conocimiento,
vivir por ella. Como dira Jos Saramago: Somos la memoria que tenemos
* Maestro en Ciencias Sociales, FLACSO sede Mxico. Jefe del rea Agraria, Desa-
rrollo Rural y Campesinado del Departamento de Produccin Econmica de la
UAM-Xochimilco.
** Doctora en Sociologa, Escuela de Altos Estudios en Ciencias Sociales, Universi-
dad de la Sorbona, Pars, Francia. Departamento de Produccin Econmica de la
UAM-Xochimilco.
14 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
1
Vase Manuel Castells (2001 y 2003).
2
Vase Boaventura de Sousa Santos 2003.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 15
3
La res publica (la cosa pblica) es un asunto del pueblo cuando por pueblo se
entiende no una agrupacin cualquiera sino una sociedad que se mantiene unida
adems de por un vnculo jurdico por un utilitares comunione (inters comn) donde
el equilibrio entre las esferas de lo pblico y lo privado se garantiza bajo la primaca
de la primera (ius publicum privatorum pactis mutare non potest o privatorum
conventio iuri publico non derogati) (Bobbio, 1987:13).
4
Una de las causas del dominio del derecho privado sobre los recursos naturales es la
enorme presin de la industria farmacutica y alimenticia del mundo, que requiere
de una oferta natural para proseguir sus investigaciones y obtener un mayor nmero
de productos (Flrez, 2004:378).
5
Al respecto, Slavoj iek (2004:36) plantea que las patentes, los derechos de autor,
etc., todas las diferentes modalidades de la informacin misma se intercambian en
el mercado como propiedad intelectual, como una mercanca ms.
16 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
6
Por mercanca absoluta Pietro Barcellona, en su libro El individualismo propietario,
entiende el objeto absoluto para el que cualquier cualidad es indiferente y que, sin
embargo, tambin escapa al mismo concepto de alienacin al convertirse en un
objeto ms objeto que el objeto, ms mercanca que la mercanca. En este triunfo
de la mercanca absoluta se realiza la desaparicin del sujeto (1996:93).
7
En una sociedad como sta no habra prcticamente espacios pblicos, ya que son
reemplazados por espacios privados que preservan y que evitan la necesidad de poner
en contacto a unos con otros. Lo que se anula es la posibilidad de comunicacin y
reciprocidad al interior de las sociedades, obstaculizando cualquier tipo de solidaridad
(Arroyo, 2005:33).
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 17
8
Vase Arturo Escobar (2003).
18 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
9
Vase Boaventura de Sousa Santos (2003:297 y ss.).
10
Vase Martin Khor (2003:9), y Jos Mara Seco (2004).
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 19
11
Vase N. I. Vavilov (1959).
12
Consultar Mara Tarro, Sonia Comboni, Catalina Einbenschutz y Rosala Fernndez
Tarro (2004).
20 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
nacional. Se plantea una estrategia donde sean los propios poseedores directos
de este conocimiento los que determinen su contenido; como ejemplo se
sugiere retomar y reelaborar la historia de la llamada medicina tradicional o
de la etnobotnica, pero sobre todo que el conocimiento tradicional perma-
nezca unido a su carcter cultural, con sus formas de transmisin y desplie-
gue de cosmovisiones propias. En esta perspectiva se expone la importancia
de asegurar la reproduccin del conocimiento tradicional reconociendo
que no es esttico sino que se encuentra en permanente construccin,
por lo que es fundamental reconocer los derechos de intercambio entre los
diversos conocimientos en un sentido de interaccin epistemolgica, donde
el punto de partida sea reconocer que no existe un sentido comn nico,
que todo conocimiento, incluido el llamado cientfico, es parcial y local
(es decir, est siempre contextualizado) a pesar de que tenga un mayor xi-
to su globalizacin fincada en el poder de los pases hegemnicos y en la
construccin de comunidades cientficas con su correspondiente ideologa
(Santos, 2003:347-348).
En cuanto a la legislacin del acceso a recursos genticos, se menciona
que sta no debe impedir las formas de difusin y reproduccin del conoci-
miento tradicional, como el libre intercambio de semillas sin fines de lucro,
y, en general, que la transferencia y difusin de estos recursos no debe dejar
a los pases, y menos a las comunidades, en una situacin de desventaja para
utilizarlos a futuro. Asimismo, se propone que la normatividad incluya a las
comunidades del conocimiento tradicional en las propias investigaciones de
los recursos genticos. En el plano internacional, se requerira de instancias
de defensa para este tipo de contratos de uso y no de propiedad sobre los
recursos y el conocimiento.
El captulo tercero, Recursos genticos y conocimiento tradicional in-
dgena: la regulacin internacional y su impacto en la legislacin mexicana,
de Francisco Lpez Brcenas y Guadalupe Espinoza Sauceda, versa sobre la
construccin del marco jurdico sobre los recursos genticos, la biodiversidad y
el conocimiento tradicional, especficamente el indgena. Su punto de partida
es que la produccin y transmisin del conocimiento tradicional se realiza
por muchas vas, y que es el resultado de varias generaciones, cuyos medios
son la tradicin oral y la construccin de estructuras colectivas y formas de
socializacin estrechamente ligadas con el entorno en que se desarrollan.
Esto permite a los autores afirmar que el conocimiento tradicional tiene
existencia en una estructura social determinada en donde ambos, sociedad
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13
Vase Mara del Pilar Valencia (1999:46).
22 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
16
Frente al monopolio ex situ de la biodiversidad representada por los bancos de ger-
moplasma y los cdigos genticos y por la diseminacin de variedades transgnicas
hay un manejo in situ; sobre esta polmica vase Armando Bartra (2006).
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 27
17
Este fenmeno se observa constantemente en las razas que se emplean en reas
dispersas o muy reducidas.
18
Las marcas indgenas, plantea Eckart Boege, deben tener como fin evitar la biopira-
tera.
28 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
20
El mercado de especialidades se caracteriza por la volatilidad, al ser estrechos esos
mercados por el desplazamiento de productos naturales por sintticos, es decir, por la
larga y concentrada cadena de intermediacin en monopolios, por lo que es crucial
crear condiciones favorables de negociacin, el cuidado de los derechos colectivos
de propiedad intelectual y, sobre todo, la construccin de redes de comunicacin y
acuerdos tendientes al ordenamiento de los mercados, segn los propios autores.
30 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
21
Consultar el documento del G-Bosques (2005).
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 31
22
En el caso de coinbio ha sido decisivo haber mantenido una definicin clara entre
agentes fiduciarios, diseo de polticas y toma de decisiones, y los ncleos agrarios
ejecutores de los proyectos.
32 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
Desde esta perspectiva, el autor plantea diversos aspectos sobre cmo los
recursos naturales y el llamado conocimiento tradicional pueden beneficiar
a los pueblos y comunidades indgenas.
En el dcimo captulo, El conocimiento popular, campesino e ind-
gena desde abajo: el caso Puebla, de Ricardo Prez Avils, Sonia Emilia
Silva Gmez y Silvestre Toxtle Tlamani, se cuestiona el concepto de conoci-
miento tradicional en tanto se reconoce como conocimiento popular, al no
encontrarse subordinado y dominado sino en franca resistencia y oposicin
al conocimiento dominante. Esto lleva a plantear la necesidad de redefinir
las reglas del juego con un sentido de igualdad y respeto a sus creadores y
no como un simple botn a saquear y del que cnicamente se pretende su
apropiacin y privatizacin.
El conocimiento popular representa un espacio en el que participan
diferentes saberes, como el conocimiento indgena y campesino, que abarca
el conjunto de los bienes y servicios culturales generados y recreados desde
los espacios rurales, en tensin, por su exclusin, con el mbito de la ciencia
y en confrontacin con el neoliberalismo que pretende que los conocimientos
de las comunidades y la riqueza biolgica se conviertan en simples mercancas
con el fin de que los grandes consorcios transnacionales obtengan jugosas
ganancias a costa de la pobreza de los pueblos originarios que se niegan a
patentar o a presentarse como propietarios de conocimientos curativos que
pertenecen a la comunidad. La expropiacin de los saberes populares y las
acciones encubiertas de biopiratera de las transnacionales, as como la aplica-
cin de modelos tecnolgicos que pervierten al viejo conocimiento y alteran
la biodiversidad, son asuntos que rebasan la violencia simblica, presentndose
como una guerra de destruccin del conocimiento campesino e indgena. Los
autores afirman que la identidad cultural de los grupos humanos en nuestro
pas est ligada a los recursos naturales, de ah la importancia de recuperar
y mantener el conocimiento popular en cualquiera de sus expresiones para
mantener cotidianamente a la propia naturaleza.
Tomando como punto de partida a los sujetos del conocimiento popu-
lar, los indgenas y campesinos, la atencin de los autores se centra en sus
prcticas y estrategias de la generacin misma del conocimiento, as como
de sus formas de transmisin y apropiacin que debiesen ser el fundamen-
to de los elementos jurdicos con el fin de lograr su proteccin. Por ello,
cualquier alternativa para proteger este conocimiento debe incorporar a los
campesinos e indgenas, pues ellos son los sujetos sociales poseedores del
34 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
Bibliografa
PROPIEDAD, biodiversidad
y conocimiento tradicional
Juan Luis Concheiro Brquez*, Violeta Nez Rodrguez**
y Luciano Concheiro Brquez***
La historia del capitalismo est marcada por una larga cadena de despojos. En
sus inicios, el capital requiri como condicin de su existencia apropiarse
de las tierras que pertenecan a diferentes pueblos indgenas y campesinos.
Esta expropiacin, violenta, fue el punto de partida para la acumulacin de
capital, proceso que implic la enajenacin, es decir, hacer ajena la tierra
en relacin a sus poseedores o propietarios originales.
Sin embargo, el despojo no slo tiene que ver con el nacimiento del
capitalismo sino con su propio desarrollo, el cual ido adoptado diferentes
caractersticas dependiendo del espacio, del tiempo y del patrn de acumulacin
del capital. La expropiacin de las tierras tuvo como fundamento acaparar
la principal fuente de riqueza, pero tambin liberar a los campesinos y
transformarlos en trabajadores dependientes del salario. A este primer esla-
bn le sigui el despojo del objeto, producto y resultado de la actividad de
la mayora de los trabajadores; fue el proceso de enajenacin de los sujetos
a los objetos, donde no interesa lo que se produzca sino producir para el
mercado. A la par, el capital, como sistema de escala mundial, fue avanzando
territorialmente, a fin de expandir su dominio, expropiando, saqueando y
sometiendo a su lgica las diferentes formas de producir incluyendo sus
expresiones territoriales hasta propagar la ley general de acumulacin
capitalista: a mayor riqueza, mayor miseria.
1
Vase Ulrich Duchrow y Franz Hinkelammert (2004).
2
Vase Emmanuel Wallerstein (2003).
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 41
3
Sabemos que existen diversas y muy distintas visiones sobre el concepto de propiedad,
sin embargo, aqu slo retomaremos algunas de ellas.
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4
Recordemos que no todos los seres humanos eran considerados como tales al prevale-
cer la esclavitud.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 43
De tal forma que para Aristteles hay quienes por naturaleza y por origen
nacieron para mandar y otros para ser mandados. Esta situacin natural
posibilita que algunos sean esclavos en todas partes y que otros no lo sean en
ninguna. Reafirmando tal posicin, nuestro autor indica que la naturaleza
no hace nada en vano, por el contrario, es por necesidad, y por razones
de seguridad, la unin entre los que por naturaleza deben respectivamente
mandar y obedecer (Aristteles, 2000:2). Dicho esto, vale entonces mencionar
que hay quienes tienen el derecho natural de poseer diversos instrumentos
para la vida o propiedades, entre ellos el esclavo.
Aunado a la concepcin natural y de origen, Aristteles agrega que
quien por su inteligencia es capaz de previsin, es por naturaleza gober-
nante y por naturaleza seor, al paso que quien es capaz con su cuerpo de
ejecutar aquellas providencias, es sbdito y esclavo por naturaleza, por lo
cual el amo y el esclavo tienen el mismo inters (Aristteles, 2000:2).
Es decir, quien posee la inteligencia es el que gobierna, los otros son sb-
ditos. Estos sbditos y esclavos no se poseen a s mismos, son propiedad del
otro. Pero de acuerdo con Aristteles, ellos no slo no son poseedores de s
mismos, de su corporeidad, sino que tampoco les pertenece la razn.5 As,
el esclavo participa de la razn en cuanto puede percibirla, pero sin tenerla
en propiedad (Aristteles, 2000:9). Para los griegos, entonces, al esclavo no
5
Segn la Real Academia Espaola, razn es la facultad de discurrir. Discurrir significa
reflexionar, pensar, hablar acerca de algo.
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6
Por ejemplo la concepcin de la familia, la idea que se tena (y que an prevalece) sobre
la mujer y los hijos.
7
Conocimiento significa entendimiento, inteligencia, razn natural (www.rae.es).
8
Cuya edicin original apareci en 1651.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 45
9
Esto se puede leer en Duchrow y Hinkelammert (2004).
10
Esta idea es desarrollada por Emmanuel Wallerstein en El capitalismo histrico.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 51
Han sido destruidos como pequea propiedad campesina, para pasar a ser
propiedad de los que se convertiran en burguesa. Este proceso de disolucin,
o enajenacin,11 no se limita a la tierra, ya que adems el capital se apropia
del trabajo. As, el capital no necesita apropiarse del trabajador, sino del
producto de su trabajo. El capital entonces no requiere hacer de su propiedad
a los trabajadores, ya que basta con la apropiacin de su trabajo.
Por tanto, la separacin de los trabajadores de la tierra y del producto
de su trabajo no le pertenecen al capital, sin embargo, l se los apropia. Al
respecto Marx indica que nada es propio del capital, a no ser el reagru-
pamiento de numerosos brazos e instrumentos que encuentra delante de
l. l los aglomera bajo su frula. Eso es todo lo que acumula en realidad
(Marx, 1970:389-390).
Marx no slo aborda el tema de la acumulacin originaria en los
Grundrisse, el tema es ampliamente tratado en El capital. En esta obra indica
que la acumulacin originaria es el proceso histrico de disociacin entre el
productor y los medios de produccin. Este proceso es de gran importancia
debido a que ste viene a desempear en la economa poltica ms o menos
el mismo papel que desempea en la teologa el pecado original (Marx,
1978:101). De este pecado original, apunta Marx, arranca la pobreza de
la gran masa que todava hoy, a pesar de lo mucho que trabaja, no tiene
nada que vender ms que a s misma y la riqueza de los pocos, riqueza que
no cesa de crecer, aunque ya haga muchsimo tiempo que sus propietarios
han dejando de trabajar (Marx, 1978:102).
Con este proceso, llamado originario debido a que representa el inicio
del capital y del modo de produccin capitalista, grandes masas de hombres
11
Enajenar significa desposeer, privarse de algo (www.rae.es).
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 53
12
Vase Manuel Medina (1997).
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 57
15
Para Joachim Hirsch (2001:140 y ss.), el Estado nacional de competencia es producto
de las propias necesidades de acumulacin del capital y en particular del proceso con-
tradictorio de globalizacin y regionalizacin de la economa mundial que requiere
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 63
16
Vase Norberto Bobbio (1979).
17
Al respecto, Joan Martnez Alier (1992) habla de un ecologismo de los pobres o de
corte populista.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 67
18
Al respecto, consultar los trabajos de Ulrich Beck, Teora de la sociedad del riesgo
(1996), y Niklas Luhmann, El concepto de riesgo (1996).
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 69
Se piensa que algunos tipos de vegetacin, como los pastizales gipsfilos del
altiplano central o los izotales dominados por plantas de los gneros Dasylirion,
Yucca o Nolina, son exclusivos de nuestro pas (Gonzlez Medrano, 2003).
En las aguas nacionales (tanto continentales como costeras y ocenicas)
tambin puede contarse una gran diversidad de ecosistemas. Dentro de los
lagos y ros y en sus mrgenes pueden observarse bosques y selvas de galera,
popales, tulares y ciertos tipos de vegetacin acutica sumergida. Entre ellos
existen ecosistemas nicos en su gnero, tanto por su composicin biolgica
como por su grado de endemismo, como son los casos de los humedales de
Cuatrocinegas en el estado de Coahuila y los lagos de Chapala y la Media
Luna en Jalisco y San Luis Potos, respectivamente (Gonzlez Medrano,
2003).
En lo que se refiere a ecosistemas marinos o con la influencia del agua
salada, en las costas del Pacfico, Atlntico y Mar Caribe pueden encon-
trarse grandes reas dominadas por manglares, lagunas costeras, estuarios,
comunidades de pastos marinos y, de manera muy especial, por arrecifes
de coral. Dentro de los arrecifes de coral son notables por su riqueza los
del Golfo de Mxico, Banco de Campeche y el Caribe, estos ltimos con-
siderados dentro de los ms diversos del continente y los cuales forman la
segunda barrera de arrecifes ms grande del mundo, despus de la Gran
Barrera Australiana.
Es importante mencionar que asociado al valor que tienen los ecosiste-
mas como reservorios de una gran riqueza biolgica y como proveedores de
muchos de los alimentos y materias primas de los que se ha valido la sociedad
para su desarrollo, tambin brindan una serie de servicios ambientales impor-
tantes que, no obstante, permanecen, como decamos, desconocidos o poco
valorados por la sociedad y menos an por la economa dominante. Entre
ellos estn la captacin y purificacin del agua que tomamos, la conservacin
y formacin del suelo del cual obtenemos muchos de nuestros alimentos, la
captacin del excesivo carbono que producen las actividades productivas, el
control de las inundaciones, la proteccin de las zonas costeras, entre muchos
otros. De ah que la conservacin de muchos de los ecosistemas nacionales
(tanto terrestres como marinos y acuticos continentales) sea prioritaria para
asegurar el futuro de las siguientes generaciones. Sin los servicios ambienta-
les que brindan los ecosistemas, las ms de las veces gracias a la economa
campesina y a la preservacin de las culturas, el bienestar de la sociedad y
el crecimiento nacional estaran seriamente comprometidos.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 71
19
Como pases megadiversos se entiende un pequeo nmero de naciones localizadas ma-
yormente en los trpicos que cuentan con un alto porcentaje de la diversidad biolgica
del planeta, en virtud de que en sus territorios se localizan numerosas especies animales
y vegetales. El concepto se acu como una forma de dar prioridad a los esfuerzos
de conservacin en el mundo. Dentro de la jurisdiccin de los Estados miembros
se localiza ms del 70% de la diversidad biolgica del planeta, aproximadamente el
45% de la poblacin mundial y la mayor diversidad cultural, tnica y lingstica de la
humanidad; elementos que confieren al grupo una importancia estratgica frente a la
comunidad internacional.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 73
Para que los sujetos del conocimiento tradicional puedan enfrentar el actual
modelo de acumulacin y su voracidad insaciable de recursos naturales, as
como confrontar su intento de apropiacin del conocimiento tradicional
que le da cuerpo a la biodiversidad, el desarrollo debe ser claramente visto
en trminos polticos como un problema estratgico que transita por la
transformacin de la poltica en lo poltico, en tanto que fortalece procesos
de cambio desde la sociedad, dotndola de canales inditos para ejercer
directamente la funcin pblica y transformar el ejercicio de lo poltico
en una estrategia de cambio social plena de regiones donde es posible el
ejercicio autnomo y autogestivo, donde lo particular y, especialmente,
la cultura aparecen sobrepolitizadas (Hopenhayn, 2001).
La cultura es una perspectiva de anlisis en la que la poltica se construye
en torno a referentes propios de las significaciones y, a la vez, de culturas
politizadas. Esta forma de ver el desarrollo requiere como elemento central
74 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
Bibliografa
Captulo II
Sobre la conceptualizacin
Conocimiento Tradicional
Fundamentos y contexto en la legislacin actual
Rebeca Alfonso Romero*
Sobre el concepto
El conocimiento tradicional tiene una conceptualizacin reciente. Usualmente
se hablaba de medicina tradicional para referirse al uso ms conocido que
tienen los pueblos precolombinos y sus descendientes sobre plantas y anima-
les; hoy, el concepto conocimiento tradicional se utiliza para abarcar tanto el
conocimiento mdico como el ecolgico, de fitomejoramiento y cultural de
estos mismos pueblos, pero sobre todo se utiliza para dar carcter de bien
privado a las tradiciones y usufructos creativos derivados de ese conocimiento
histrico que sobre su territorio han desarrollado.
Este carcter es el que permite hablar con naturalidad de un reparto
de beneficios justo y equitativo para los pueblos y personas que decidan dar
su conocimiento a empresas e institutos de investigacin. ste es el objeto
de legislaciones, discusiones y talleres que desde los noventa se realizan en
varias partes del mundo para normar de alguna manera la bioprospeccin
en territorios soberanos naciones y sus tipos locales de apropiacin de
tierras y el posible patentamiento de los resultados de ella.
Mxico, como parte del Convenio sobre Diversidad Biolgica (CDB), est
comprometido a tener una legislacin que englobe este reparto de beneficios;
y siendo uno de los 12 pases megadiversos (en biodiversidad)1 y pluricul-
Las formas de acceso a recursos genticos estn propuestas desde dos con-
venios internacionales: la Unin Internacional para la Obtencin de Varie-
dades Vegetales (UPOV) y el Convenio sobre Diversidad Biolgica (CDB). Se
considera que la UPOV se enmarca en el concepto clsico de derechos de
propiedad intelectual (DPI), mientras que el CDB lograra la ejecucin de
legislaciones especiales que favorezcan mediante convenios reglamenta-
dos la obtencin de beneficios para gobiernos y comunidades que vendan
o intercambien sus recursos genticos y conocimiento tradicional; este marco
legal se llama sui generis.
La bioprospeccin se realiza de dos formas: puede ser que una empresa
o institucin explore un rea natural, o bien, que busque entre los habitantes
de un territorio a las personas que saben los usos de las plantas y aproveche
ese conocimiento ya estudiado para desarrollar algn producto patentable.
Brasil, China, Colombia, Congo, Ecuador, Estados Unidos, Filipinas, India, Indone-
sia, Malasia, Madagascar, Per, Papua-Nueva Guinea, Sudfrica y Venezuela (Russell
Mittermeier et al., 1997). Russell Mittermeier fue el primero en proponer el enfoque
de pases megadiversos en 1988, refirindose en un principio slo a cuatro pases;
ms tarde el concepto se ampli a 12 y despus a 17. Entre los principales criterios que
utiliz para definir a estos 17 pases est el grado de endemismo. Para seleccionar a los
pases megadiversos hizo un anlisis del endemismo vegetal, principalmente de plan-
tas superiores, y de representantes del reino animal, entre los cuales se consideraron
cuatro grupos de vertebrados: aves, mamferos, reptiles y anfibios. Otros criterios que
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 81
3
Se cita en el documento base de la Reunin Ministerial de Pases Megadiversos reali-
zada en Cancn, Mxico, que segn reportes de la OCDE de 1997, 25% del mercado
farmacutico mundial est basado en material biolgico. OCDE, Issues in the Sharing
of Benefits Arising out of the Utilisation of Genetic Resources, OCDE/GD(97)193, 1997.
Segn datos de la Organizacin Mundial de la Propiedad Intelectual, las ventas mun-
diales de productos derivados de medicinas tradicionales alcanzaron 4 300 millones
de dlares en 1999 [OMPI (1999), Intellectual Property. Needs and Expectations of Tra-
ditional Knowledge Holders Report on Fact-finding Missions on Intellectual Property and
Traditional Knowledge, OMPI, 1999]. Ambas cifras citadas en: Semarnat, 2002.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 85
Incluso, para los algunos sectores que optan por la patentizacin de los re-
cursos genticos, el problema de la definicin de conocimiento tradicional se
extiende a la necesaria reformulacin de los requisitos de patente y registro
de propiedad intelectual, pues el conocimiento tradicional carece del carcter
innovador necesario para el otorgamiento de patente (Kanaja, 2004).
Retornando a la cuestin de la medicina tradicional en Mxico y su
importancia central en la cuestin del acceso a los recursos genticos, el tema
obligado es el de los pueblos indgenas, los cuales conservan la mayora de
ese conocimiento en el pas.
El 10% de los habitantes de Mxico se reconoce como indgena en las
encuestas institucionales, con ello se habla a la vez de un tejido complejo
de sistemas consuetudinarios vigentes, en reordenamiento y en decadencia;
la magnitud de su conocimiento tradicional debe ser enorme an, sin con-
siderar que las comunidades campesinas no reconocidas como indgenas
tambin han de practicar este conocimiento que como se sabe no es esttico
sino que mantiene la experimentacin e innovacin continua. Para dar una
idea del control de la salud de la Mesoamrica precolonial que sera el
antecedente ms prximo de la medicina herbolaria indgena, baste decir
que aunque se tiene informacin de epidemias de disentera, influenza, y
neumona, reumatismo, artritis y tuberculosis (a diferencia de las epidemias
infecciosas asociadas al ganado como la viruela y el sarampin), la esperanza
de vida era de alrededor de 37 ms menos tres aos, cifra que sobrepasa
el promedio de vida en Francia en el ao 1800, que era de alrededor de
29 aos (Ortiz, 2005). La riqueza en el tema abunda en nuestro pas por la
amplia diversidad de pueblos indgenas dispersos en un territorio que cuenta
con el 10% de la biodiversidad del planeta, que abarca varios tipos de ecosis-
temas con sus respectivas posibilidades de especies endmicas y no.4 Hablar
4
La diversidad de culturas y su conocimiento estn en real peligro de extincin, aunque
no conozco un estudio local de prdida de culturas, baste considerar los altos ndices
de migracin en nuestro pas. El patentamiento del conocimiento tradicional puede
llegar a considerarse una urgencia antes de que sta desaparezca; en Brasil, se extingui
86 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
el 85% de los grupos indgenas en la primera mitad del siglo XX y alrededor de un gru-
po por ao desaparece en la Amazonia desde 1900 (Dinah Shelton, Fair Play, Fair Pay:
Preserving Traditional Knowledge and Biological Resources, en Yearbook of International
Environmental Law, vol. 5, Reino Unido, 1995, cit. en Semarnat, 2002).
5
El mismo autor, para recalcar que depende de la perspectiva que se parta, plantea
que se pueden considerar las soluciones para evitar la biopiatera, si se considera que
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 87
7
En la conferencia dictada el 6 de diciembre de 2005 en la H. Cmara de Diputados, en
el marco del seminario sobre el campo mexicano organizado por el Centro de Estudios
en Desarrollo Rural, Soberana y Desarrollo Sustentable.
8
Incluso se habla de que hay una tercera forma de concebir la propiedad, que no sea ni
por derechos de propiedad intelectual ni por dominio pblico, una tercera que tenga
que ver con los sistemas consuetudinarios propios de los pueblos indgenas, tal vez la
que tiene que ver con las formas de acceso a ese conocimiento (Correa, 2001).
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 89
Otras expresiones igualmente relevantes pero con menos resonancia son las
recabadas en pequeos talleres locales. El caso de Colombia muestra esta
situacin; ah se realiz un taller en 2003 para dar a conocer la propues-
ta de Ley de Acceso a Recursos Genticos local en el cual se especific
que los invitados estaban convocados para su informacin solamente. Un
integrante de la organizacin Proceso de Comunidades Negras intervi-
no para mencionar el problema que representa a las comunidades con
conocimiento tradicional comprender el sentido moderno de los nuevos
trminos legales:
Hay problemas con las definiciones que no se pueden entender tan fcil-
mente dentro de la comunidad. Por ejemplo, en una escala temporal, el
concepto de tradicional es ms reciente que el de ancestral; la separacin
entre tangible e intangible no se entiende por las comunidades. Para las
comunidades el conocimiento no se puede separar del recurso. Podemos
construir elaboraciones tcnicas o acadmicas vlidas pero que no sean de
fcil comprensin para la comunidad (III Taller Nacional sobre Proteccin
al Conocimiento Tradicional, Colombia, 2003).
92 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
9
Integrada por Bolivia, Colombia, Ecuador, Per y Venezuela.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 95
10
Informacin de Carlos Correa (2001:13).
96 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
Bibliografa
De acuerdo con lo anterior, los recursos genticos son parte de los recursos
biolgicos y los recursos biolgicos son organismos o parte de ellos, o po-
blaciones de ellos o cualquier componente bitico con valor real o potencial
para la humanidad. O sea, todo material viviente o parte de ellos que tenga
o pueda tener un valor comercial.
Que se sepa, hasta ahora no existe una definicin aceptada sobre co-
nocimiento tradicional, porque ni los pueblos ni las comunidades indgenas,
ni las empresas transnacionales las han necesitado. El hecho de que no
exista una conceptualizacin general aceptable sobre el tema no representa
ningn problema para los pueblos indgenas, pues ellos saben que aunque
no tenga una definicin general, incluye varios e importantes aspectos de
su vida cotidiana, como la medicina, la agricultura tradicional, la ecologa,
as como la msica, las historias y poemas, la danza, el diseo y la escultura
tradicionales.
Es a los organismos internacionales a quienes interesa definirlo, pues
slo de esa manera se puede saber con certeza a qu se refieren con l y
de esa manera facilitar su manejo y apropiacin. As, desde las instancias
internacionales han expresado que:
El conocimiento tradicional se refiere al conocimiento, las innovaciones
y las prcticas de las comunidades indgenas y locales de todo el mundo.
Concebido a partir de la experiencia adquirida a travs de los siglos, y
adaptado a la cultura y al entorno locales, el conocimiento tradicional
se transmite por va oral, de generacin en generacin. Tiende a ser de
propiedad colectiva y adquiere la forma de historias, canciones, folklore,
refranes, valores culturales, rituales, leyes comunitarias, idioma local y
prcticas agrcolas, incluso la evolucin de especies vegetales y razas ani-
males. El conocimiento tradicional bsicamente es de naturaleza prctica,
en especial en los campos de la agricultura, pesca, salud, horticultura y
silvicultura (PNUMA, s/f ).
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 107
Esta disposicin jurdica tiene una elaboracin muy compleja que hay que
desmenuzar para poder entender.
Un primer contenido de ella es una facultad discrecional a favor de
los miembros firmantes del Acuerdo sobre TRIPS para que decidan sobera-
namente si patentan o no plantas o animales. La disposicin es gravsima
en doble sentido. En primer lugar porque las patentes hasta hace pocos
aos slo se otorgaban sobre inventos, no sobre descubrimientos, y si un
pas decide otorgar patentes sobre plantas y animales estara dando a la
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 115
La legislacin nacional
En la legislacin mexicana el tema de la biodiversidad y los conocimientos
tradicionales de los pueblos indgenas se ha ido introduciendo por la puerta
trasera, de manera subrepticia. Eso ya da la medida de su contenido y alcance,
que la mayora de las veces se ha realizado negando el carcter colectivo de
los derechos de los pueblos indgenas, y lo que se ha reconocido se ha hecho
de tal manera que no existe garanta alguna de proteccin del derecho o,
en el mejor de los casos, se establece como facultad del Estado y no como
garanta a favor de los pueblos indgenas interesados.
Atendiendo a las fechas de su aprobacin, la primera ley en donde se
encuentran referencias a la biodiversidad y los recursos biolgicos es la Ley
General de Equilibrio Ecolgico y Proteccin al Ambiente.1 En una primera
parte se expresa de manera general que para la formulacin y conduccin de
la poltica ambiental y la expedicin de normas oficiales mexicanas y dems
instrumentos previstos en ella, en materia de preservacin y restauracin del
equilibrio ecolgico y proteccin al ambiente, el Ejecutivo Federal observar
varios principios, entre ellos el de garantizar el derecho de las comunidades,
incluyendo a los pueblos indgenas, a la proteccin, preservacin, uso y
aprovechamiento sustentable de los recursos naturales y la salvaguarda y uso
de la biodiversidad, de acuerdo a lo que determine la presente Ley y otros
ordenamientos aplicables.
De igual manera, en materia de reas naturales protegidas, dicta que su
establecimiento tiene por objeto, entre otros,
salvaguardar la diversidad gentica de las especies silvestres de las que depende la
continuidad evolutiva; as como asegurar la preservacin y el aprovechamiento
sustentable de la biodiversidad del territorio nacional, en particular preservar
las especies que estn en peligro de extincin, las amenazadas, las endmicas,
las raras y las que se encuentran sujetas a proteccin especial; generar,
rescatar y divulgar conocimientos, prcticas y tecnologas, tradicionales o
nuevas que permitan la preservacin y el aprovechamiento sustentable de
la biodiversidad del territorio nacional; y proteger los entornos naturales
de zonas, monumentos y vestigios arqueolgicos, histricos y artsticos, as
como zonas tursticas, y otras reas de importancia para la recreacin, la
cultura e identidad nacionales y de los pueblos indgenas.
1
Reformas a la Ley General de Equilibrio Ecolgico y Proteccin al Ambiente, Diario
Oficial de la Federacin, 13 de diciembre de 1996.
118 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
Hay que hacer notar que la referencia a pueblos indgenas resulta ociosa
dado que stos no tienen reconocidos sus derechos territoriales y las tierras
que ocupan jurdicamente pertenecen a ejidos y comunidades de las que
forman parte.
Por ltimo, en su captulo de Flora y fauna silvestre, prev que para
la preservacin y el aprovechamiento sustentable de la flora y fauna silvestre
deber considerarse
la preservacin de la biodiversidad y del hbitat natural de las especies de
flora y fauna que se encuentran en el territorio nacional y en las zonas
donde la nacin ejerce su soberana y jurisdiccin; y con ella el conoci-
miento biolgico tradicional [requiere de] la participacin de las comuni-
dades, as como los pueblos indgenas en la elaboracin de programas de
biodiversidad de las reas en que habiten.
Basta ver la fecha de la reforma a la anterior ley para darse cuenta de que
fue influida por la firma del Convenio sobre Diversidad Biolgica. Un hecho
similar sucedi poco despus de la firma del Tratado de Libre Comercio (TLC)
entre los Estados Unidos Mexicanos, los Estados Unidos de Amrica y Canad.
En el mes de agosto del 2004 se reform la Ley de la Propiedad Industrial2
para incluir en ella el tema de las patentes sobre la materia viva.
En su artculo 4 reformado la mencionada ley contiene una dispo-
sicin genrica donde se establece que no se otorgar patente, registro o
autorizacin, ni se dar publicidad en la Gaceta, a ninguna de las figuras o
instituciones jurdicas que regula esta Ley, cuando sus contenidos o forma
sean contrarios al orden pblico, a la moral y a las buenas costumbres o
contravengan cualquier disposicin legal (Diario Oficial de la Federacin, 2
de agosto de 2004); una disposicin muy similar a la contenida en el 1709
del Tratado de Libre Comercio mencionado.
La disposicin especfica sobre la materia est en su artculo 16, ubi-
cado en el captulo dos dedicado a las patentes. Este artculo, textualmente
expresa:
Sern patentables las invenciones que sean nuevas, resultado de una ac-
tividad inventiva y susceptibles de aplicacin industrial, en los trminos
de esta Ley, excepto:
2
Reformas a la Ley de la Propiedad Industrial, Diario Oficial de la Federacin, 2 de
agosto de 2004.
120 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
Una expresin rara, pues no es nada lgico que una institucin federal ajena
a los pueblos indgenas pueda capacitar a las comunidades indgenas para
preservar o recuperar el conocimiento tradicional creado por estas ltimas.
La ley tambin prev que los gobiernos federal y estatales puedan
suscribir con los productores, individualmente u organizados, contratos de
aprovechamiento sustentable de tierras definidos regionalmente, con el objeto
de propiciar un aprovechamiento til y sustentable de las tierras, buscando
privilegiar la integracin y la diversificacin de las cadenas productivas, ge-
nerar empleos, agregar valor a las materias primas, revertir el deterioro de
3
Diario Oficial de la Federacin, 7 de diciembre de 2001.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 121
Dicho en otras palabras, se puede hacer lo que la ley permite, situacin que
se presenta, aun si este artculo no lo dijera, pues no es lgico pensar que la
ley establece que se pueden realizar actos contrarios a sus disposiciones.
El mismo artculo anterior expresa en su segunda parte que
la Comisin Intersecretarial, con la participacin del Consejo Mexicano,
establecer las medidas necesarias para garantizar la integridad del pa-
trimonio de biodiversidad nacional, incluidos los organismos generados
en condiciones naturales y bajo cultivo por los productores, as como
la defensa de los derechos de propiedad intelectual de las comunidades
indgenas y campesinos.
intelectual pero no se dice contra quin o contra qu, pues en otra parte
faculta a los mismos rganos de gobierno a autorizar la bioprospeccin.
Por su parte, la Ley de Desarrollo Forestal Sustentable4 en su artculo
2 establece los objetivos de ella, entre los cuales ubica respetar el derecho
al uso y disfrute preferente de los recursos forestales de los lugares que
ocupan y habitan las comunidades indgenas, en los trminos del artculo
2 fraccin VI de la Constitucin Poltica de los Estados Unidos Mexicanos
y dems normatividad aplicable, una disposicin que reitera lo establecido
en la propia Carta Magna, por lo que nada tienen de novedad ni establece
derecho nuevo.
El artculo 5 de la ley es importante porque clarifica a quin pertenecen
los recursos forestales. Al respecto expresa que:
La propiedad de los recursos forestales comprendidos dentro del territorio
nacional corresponde a los ejidos, las comunidades, pueblos y comunida-
des indgenas, personas fsicas o morales, la Federacin, los Estados, el
Distrito Federal y los municipios que sean propietarios de los terrenos
donde aqullos se ubiquen. Los procedimientos establecidos por esta Ley
no alterarn el rgimen de propiedad de dichos terrenos.
Esta norma jurdica tiene tres contenidos diversos. En primer lugar legaliza
las colectas de recursos biolgicos forestales con dos fines especficos: co-
merciales y cientficos. La nica condicin para ello es que se reconozca la
propiedad del conocimiento y el uso de las comunidades indgenas sobre
ellas. El tercer contenido es que pueden registrar y obtener patentes, incluso
modificar los recursos biolgicos forestales que colecten, con la condicin de
que recaben el reconocimiento previo de los propietarios, y si no lo hicieren,
la nica sancin es que tales registros o patentes sern nulos, a menos que
los tratados internacionales digan otra cosa.
Cuando adems se pretenda aprovechar los conocimientos de los pueblos
y comunidades indgenas sobre los recursos biolgicos forestales, deber
reconocerse la propiedad del conocimiento de los pueblos indgenas y
presentar un convenio celebrado entre el solicitante de la autorizacin a
que se refiere el artculo anterior y la comunidad titular del conocimiento,
en el que se acredite que se cuenta con el consentimiento previo, expreso
e informado de sta [y] podr revocarse el permiso correspondiente si se
acredita que no se satisficieron los requisitos mencionados.
Ms adelante se expresa que:
La Comisin deber promover y apoyar el conocimiento biolgico tra-
dicional de los pueblos y comunidades indgenas y ejidos, as como el
124 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
5
Diario Oficial de la Federacin, 24 de diciembre de 1996.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 125
Bibliografa
DAES, Erica-Irene A., 1997. Proteccin del Patrimonio de los Pueblos Indgenas,
Naciones Unidas, Nueva York. [La autora es Relatora Especial de la
Subcomisin de Prevencin de las Discriminaciones y Proteccin a las
Minoras, Presidenta del Grupo de Trabajo sobre Poblaciones Indgenas
en la ONU.]
Diario Oficial de la Federacin, 1993. Convenio sobre Diversidad Bio-
lgica, 7 de mayo, entrada en vigor 29 de diciembre.
, 1996. Reformas a la Ley General de Equilibrio Ecolgico y Proteccin
al Ambiente, 13 de diciembre.
, 1996. Ley Federal de Derechos de Autor, 24 de diciembre.
, 2001. Decreto por el que se adiciona un segundo y tercer prrafo al
artculo 1, se reforma el artculo 2, se deroga el artculo 4; y se adiciona
un sexto prrafo a la fraccin tercera del artculo 115 de la Constitucin
Poltica de los Estados Unidos Mexicanos, 14 de agosto.
, 2001. Ley de Desarrollo Rural Sustentable, 7 de diciembre.
, 2003. Ley de Desarrollo Forestal Sustentable, 25 de febrero.
, 2004. Reformas a la Ley de la Propiedad Industrial, 2 de agosto.
Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, (s/f ). El
conocimiento tradicional y el Convenio sobre Diversidad Biolgica, do-
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 131
Captulo IV
Introduccin
Los derechos de propiedad intelectual (DPI) adquirieron una inusitada cen-
tralidad en la nueva economa global, donde predomina el factor conoci-
miento, las dimensiones simblicas, la informacin y las biotecnologas. Este
cambio se tradujo en presiones polticas y comerciales de las corporaciones
transnacionales principalmente de la industria farmacutica, biotecnolgica,
informtica y cultural en dos direcciones complementarias:
a) establecer sistemas de proteccin mundial que blinden la seguridad
jurdica de los titulares de patentes, marcas, copyright, etc., en los dis-
tintos territorios nacionales y regionales. Es el rgimen internacional
de propiedad intelectual.
b) establecer regmenes internacionales que faciliten y legalicen la apro-
piacin de recursos biolgicos del sur, incluidos los recursos genticos,
bioqumicos de los territorios indgenas y sus conocimientos tradicio-
nales asociados. Son el rgimen de acceso a recursos genticos y el
mercado de servicios ambientales.
2
El Convenio de Pars ha sido revisado en siete ocasiones, la ltima en 1979. En l se
entiende la propiedad industrial en una acepcin amplia y aplica no slo a la industria
y al comercio propiamente dichos, sino tambin al dominio de las industrias agrcolas
y extractivas y a todos los productos fabricados o naturales. El artculo 1 del convenio
indica que la proteccin de la propiedad industrial tiene por objeto las patentes de
invencin, los modelos de utilidad, los dibujos o modelos industriales, las marcas de
fbrica o de comercio, las marcas de servicio, el nombre comercial, las indicaciones
de procedencia o denominaciones de origen, as como la represin de la competencia
desleal.
El Convenio de Berna ha tenido siete revisiones sucesivas en el tiempo, la ltima en
Pars en el ao 1971. Regula el derecho de autor y aplica el principio de trato nacional,
as como la suspensin de todo formalismo para la proteccin de las obras de origen
extranjero; fija un mnimo de duracin del derecho en la vida del autor en ms de 50
aos (50 aos p.m.a.) y reconoce el derecho moral de paternidad y de integridad.
3
El convenio entr en vigencia en 1968. A escala mundial, la UPOV es la instancia que
acta como eje de decisiones, debates e ideas y a su alrededor se da gran parte de la
discusin y legislacin en materia de proteccin de obtenciones vegetales. La UPOV
es una unin de pases que comparten una legislacin armonizada de proteccin
de variedades vegetales, en cuyo seno se redactan las denominadas Actas que rigen
los contenidos de las legislaciones nacionales de los Estados miembros. La primera
de ellas data de 1961, mientras que en marzo de 1991 se adopt la ltima (Rapela,
2000:25-30).
136 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
4
Artculo 1, Acta de la UPOV de 1991. De acuerdo al Acta de UPOV de 1991 el obtentor
es la persona que ha creado o descubierto y desarrollado una variedad de planta o bien
el empleador de dicha persona o que haya encargado el trabajo.
5
Artculo 5, Acta de la UPOV de 1991. El requisito de novedad tiene por finalidad ve-
lar porque la variedad no haya sido objeto de explotacin comercial. Se trata de una
evaluacin puramente jurdica y no tcnica. Una variedad se considera nueva si se
distingue claramente de otra variedad cuya existencia, en la fecha de presentacin de
la solicitud, sea notoriamente conocida. La definicin tcnica exacta de la distincin
reside en la descripcin biolgica de la variedad. Basta la opinin de un experto tcnico
para determinar esta cuestin. Una variedad se considera homognea si es suficiente-
mente uniforme en sus caractersticas pertinentes, a reserva de la variacin previsible
habida cuenta de las particularidades de su multiplicacin vegetativa. Esto significa
en pocas palabras que las plantas de una variedad deben ser iguales o muy similares, y
que el grado de similaridad depende del mtodo de multiplicacin seleccionado. Y es
estable si los caracteres de la planta se mantienen inalterados despus de reproducciones
o multiplicaciones sucesivas o, en caso de un ciclo particular de reproducciones o de
multiplicaciones, al final de cada ciclo. Se exige tambin que la variedad sea designada
por una denominacin destinada a ser su designacin genrica (Rapela, 2000:36).
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 137
6
Artculo 19, Acta de la UPOV de 1991.
138 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
8
Pfizer Forum: Intellectual Property Rights and International Trade, The Economist,
27 de mayo de 1995, p. 26.
9
Inicialmente el tema de los DPI fue introducido por Estados Unidos desde la ronda de
Tokio, a propsito de la falsificacin de marcas, y se sumaron la Unin Europea, Japn
y Canad. Para la siguiente ronda se incluyeron no slo las marcas comerciales sino
todos los derechos de propiedad intelectual.
10
Anexo 1C Acta Final de la Ronda Uruguay del GATT, suscritos en Marrakech, Marrue-
cos, el 15 de abril de 1994.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 141
que se han suscrito entre pases en desarrollo y las principales potencias del
mundo. Estos tratados y acuerdos incluyen clusulas especficas sobre DPI, con
estndares superiores a los ADPIC.
Simultneamente, en algunos de estos tratados se introdujeron obliga-
ciones de proteger los derechos de propiedad intelectual en calidad de
inversiones,12 con todas las implicaciones del caso en trminos de disciplinas
y mecanismos de resolucin de controversias a las que pueden recurrir con
inversionistas contra eventuales actos de los Estados parte, que pueda ser
considerada una medida expropiatoria.
En los hechos, estos tratados y acuerdos han sobrepasado las normas
internacionales sobre DPI, tanto de la OMC como las que estn actualmente en
debate en diversos foros multilaterales, como en la OMPI. Tales instrumentos
bilaterales y regionales han ampliado el alcance de los derechos de propiedad
intelectual a asuntos no cubiertos en los ADPIC. Los negociadores de los pases
desarrollados han presionado a los pases en desarrollo suscriptores de estos
tratados bilaterales de inversin y acuerdos de libre comercio a superar los
estndares ADPIC, que ya eran elevados, y han reducido el ya estrecho espacio
de flexibilidad de los Estados en materia de DPI. Ms an, por la va de las
clusulas de nacin ms favorecida de los tratados bilaterales de inversin
y Acuerdos de Libre Comercio, que incluyen DPI explcitamente o como
inversin, se ha introducido un mecanismo que presionar hacia elevar
globalmente las normas de proteccin de los DPI.
Como seala Carlos Correa:
Los acuerdos de inversin generalmente se aplican a todos los tipos de
activos, independientemente de su carcter tangible o intangible y del
sector en el cual estn invertidos, lo que incluye diversas formas de pro-
piedad intelectual. Es as que los derechos de propiedad intelectual, estn
registrados o no, son inversiones protegidas por los tratados bilaterales de
inversin y los acuerdos comerciales que incorporan normas sobre inversiones.
Esto agrega otra capa de proteccin basada en los tratados a los derechos
protegidos por el Acuerdo sobre los ADPIC y otros convenios internacionales.
Pero va ms all de los ADPIC ya que los acuerdos de inversin se aplican
a los derechos que no estn amparados por el Acuerdo sobre los ADPIC e
que inspira las negociaciones sobre los derechos indgenas en el seno de las
Naciones Unidas y la OEA.
En este contexto de un nuevo rgimen internacional de propiedad
intelectual, los convenios ambientales adquieren un insospechado perfil de
amenaza, toda vez que tanto el Convenio sobre Diversidad Biolgica (CDB)
como el Protocolo de Kyoto han alentado la exploracin y explotacin de
los territorios indgenas. El primer caso tiene modalidades conocidas como
bioprospeccin y patentamiento; en el segundo caso, las nuevas amenazas
han emergido bajo la modalidad de contratos de servicios ambientales.
Desde la perspectiva de los actores indgenas, los cambios regulatorios
internacionales operados en los regmenes de comercio y medio ambiente,
en especial el nuevo marco sobre DPI, y las polticas de comercio de la bio-
diversidad y acceso a los recursos genticos, impactan negativamente sobre
los derechos de los pueblos indgenas reconocidos en el rgimen internacional
de derechos humanos.
Los tratados internacionales comerciales y de inversin multilaterales,
regionales y bilaterales y los convenios medioambientales que incluyen
regulaciones sobre derechos de propiedad intelectual y acceso a recursos de
biodiversidad y servicios ambientales, no slo afectan la soberana de los
pases sino tambin han comprometido los intereses, derechos, territorios y
soberana de los pueblos indgenas que se encuentran bajo las jurisdicciones
de los Estados partes. Tales tratados regulan explcita o implcitamente el
acceso y la patentabilidad de recursos, biodiversidad y patrimonio cultural
e intelectual indgena.
13
Artculo 1. (2). Para el logro de sus fines, todos los pueblos pueden disponer libremente
de sus riquezas y recursos naturales, sin perjuicio de las obligaciones que derivan de la
cooperacin econmica internacional basada en el principio del beneficio recproco,
as como del derecho internacional. En ningn caso podr privarse a un pueblo de sus
propios medios de subsistencia.
14
Los conceptos de territorio y territorialidad tienen distinta acepcin: i) Dimensin Po-
ltica: jurisdiccin, gobierno, normas y decisiones. Es lo que se expresa como terri-
torialidad y territorio poltico; ii) Dimensin Cultural: se refiere a la idea de espacio
socialmente organizado, esto es, un espacio geogrfico significativo culturalmente, en
el cual se localizan, distribuyen y organizan asentamientos, significados, actividades
148 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
de un grupo; iii) Dimensin Natural: unidad de los recursos naturales, agua, tierra,
subsuelo, vegetacin.
15
Los peligros que hoy identifican algunas organizaciones ecologistas ya haban sido
advertidos en 1990 por Andrew Gray (1992) del Grupo Internacional de Asuntos
Indgenas.
16
Un ejemplo es la posicin de Joseph Vogel (1994 y 2000).
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 149
19
Ibidem.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 151
20
Brasil y Argentina plantearon a la Asamblea de la OMPI del 2004 que: a escala interna-
cional, se reconoce cada vez ms la necesidad de incorporar la dimensin de desarrollo
en las polticas relacionadas con la proteccin de la propiedad intelectual [...] el man-
dato de la OMPI conlleva indudablemente tener en cuenta los amplios compromisos y
resoluciones en materia de desarrollo contrados por todo el sistema de las Naciones
Unidas. No obstante, tambin cabe considerar la posibilidad de modificar el Convenio
de la OMPI (1967) para que garantice definitivamente la inclusin de la dimensin de
desarrollo como elemento fundamental del programa de trabajo de la Organizacin
(WO/GA/31/11, 27 de agosto de 2004).
21
Una referencia explcita a la necesidad de tener debidamente en cuenta la dimensin
de desarrollo se recogi en el prrafo 19 de la Declaracin Ministerial de Doha de
2001, que asigna al Consejo de los ADPIC un mandato en el marco del Programa de
Doha para el Desarrollo. La Declaracin de Doha prev que la labor llevada a cabo en
el Consejo de los ADPIC relativa a los exmenes (el examen del prrafo 3b) del artculo
27 o al examen del Acuerdo sobre los ADPIC en su totalidad, previsto en el prrafo 1 del
artculo71 y a cualquier otra cuestin relativa a la aplicacin (tanto dentro como fuera
del marco de la OMC), debera abarcar tambin los aspectos siguientes: la relacin entre
el Acuerdo sobre los ADPIC y el Convenio de las Naciones Unidas sobre la Diversidad
Biolgica, la proteccin de los conocimientos tradicionales y el folclor y otros nuevos
elementos pertinentes sealados por los gobiernos miembros en el examen del Acuer-
do sobre los ADPIC. En la Declaracin se establece asimismo que, al realizar esta labor,
el Consejo de los ADPIC se regir por los objetivos (artculo7) y principios (artculo 8)
enunciados en el Acuerdo sobre los ADPIC y tendr plenamente en cuenta los temas
relacionados con el desarrollo.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 153
22
En 1999 la reunin intersesional sobre la operacin del convenio analiz la relacin
entre los DPI, el CDB y las normas establecidas en los ADPIC. En esa ocasin se reco-
mend a la Conferencia de las Partes (COP-5) representar a la OMC y a la OMPI, las
recomendaciones pertinentes al artculo 8 j) del CDB, e invitar a la OMC a que reco-
nozca las disposiciones del CDB. El tema de la relacin entre ADPIC y CDB fue debatido
en la COP-5 realizada en Nairobi, en el punto 23 de la agenda, sobre acceso a recursos
genticos (Correa, 2001).
23
OMC. ADPIC: EXMENES, APARTADO B) DEL PRRAFO 3 DEL ARTCULO 27 Y ASUNTOS
CONEXOS, en http://www.wto.org/spanish/tratop_s/trips_s/art27_3b_background_
s.htm
154 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
24
Diversos pases han presentado documentos de propuesta al Consejo de los ADPIC
para impulsar la revisin del prrafo 3b del artculo 27, y resolver la relacin entre el
Acuerdo sobre losADPIC y el Convenio sobre la Diversidad Biolgica y la proteccin
de los conocimientos tradicionales. De particular inters son los documentos del Gru-
po Africano, India y Brasil, presentados en 2003 y 2004. Vase en http://www.wto.
org/spanish/tratop_s/trips_s/art27_3b_s.htm
25
Cf. Declaraciones del Taller Internacional de Pueblos Indgenas y Biodiversidad, pre-
sentadas en cada ocasin a las Conferencias de las Partes del CDB desde 1997 a 2004.
Tambin, D. Posey y G. Dutfield (1999).
26
Se puede consultar al respecto el Estudio sobre la proteccin de la propiedad cultural e
intelectual de los pueblos indgenas de Irene Erica Daes, relatora especial y presidenta del
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 155
Frente a los nuevos desafos para los derechos y territorios de los pueblos
indgenas no existe una nica respuesta. Es posible constatar, a lo largo del
mundo, una amplia variedad de propuestas, posiciones y experiencias respecto
a los mecanismos jurdicos e institucionales para realizar tal programa de
derechos. Sin embargo, la piedra de toque para evaluar la pertinencia de esos
mecanismos debiera ser cunto garantizan la soberana permanente de los
pueblos indgenas sobre sus recursos, conocimientos y territorios, entendiendo
que eso es lo que est en juego y no la propiedad intelectual, con las bases
de su libredeterminacin.
Las diferencias de propuestas las resume el informe de Yozo Yokoda y
Consejo Sami al Grupo de Trabajo sobre Poblaciones Indgenas de la ONU:
Varios representantes indgenas consideran que el rgimen de derechos
de propiedad intelectual no es un sistema adecuado para la proteccin
de su patrimonio cultural, mientras que otros reconocen que a veces
los mecanismos relativos a esos derechos pueden proteger por lo menos
determinados elementos del patrimonio cultural de los pueblos indgenas.
Los que no estn plenamente de acuerdo con la creacin de un rgimen
internacional de derechos de propiedad intelectual para la proteccin del
patrimonio cultural de los pueblos indgenas piden que se establezcan en
su lugar sistemas sui generis (Yokota, 2004).
27
Foro Internacional Indgena sobre Biodiversidad, Declaracin de Clausura, VII Confe-
rencia de las Partes del Convenio sobre la Diversidad Biolgica, Kuala Lumpur, Malasia,
20 de febrero de 2004.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 159
Los sistemas derivados del CDB: aquellos que poseen como objetivo
principal la conservacin de la biodiversidad y utilizan mecanismos
reconocidos por el convenio. Entre stos se encuentran el Rgimen
Comn de Acceso a los Recursos Genticos de la Comunidad Andina
de Naciones y el Proyecto de Rgimen de Proteccin de los Conoci-
mientos Colectivos de los Pueblos Indgenas del Per.
El Rgimen Comn de Acceso a los Recursos Genticos de la Comuni-
dad Andina de Naciones conformada por Bolivia, Colombia, Ecuador,
Per y Venezuela regula las condiciones de acceso sobre los recursos
genticos. En la disposicin transitoria de la Decisin 391 de 1996
se estableci el futuro desarrollo de un rgimen especial o una norma
de armonizacin para fortalecer la proteccin de los conocimientos,
innovaciones y prcticas tradicionales de las comunidades indgenas, afro-
americanas y locales (COICA, 1998:19), incluyendo a los derivados de
los recursos genticos. Asimismo establece que los contratos de acceso
deben tomar en cuenta los derechos y los intereses de los proveedores
de los recursos genticos, sus derivados y los componentes intangibles.
Se definen estos ltimos como:
Todo conocimiento, innovacin o prctica individual o colectiva, con
valor potencial o real, asociado a los recursos genticos, a los productos
derivados o a los recursos biolgicos que los contienen, estn o no
protegidos por los regmenes de propiedad intelectual. En caso de que
haya un recurso que incluya un componente intangible, la decisin exige
la identificacin del proveedor del recurso gentico y sus derivados, y
la incorporacin de un anexo al contrato de acceso donde se prevea la
distribucin equitativa de los beneficios resultantes por el acceso a los
elementos anteriores (GRULAC, 2001:8).
Las opciones sui generis derivadas de la propiedad intelectual: aquellas
que fundamentan la proteccin en la utilizacin de una o varias fi-
guras o elementos de la propiedad intelectual. Una de las propuestas
en esta lnea es el sistema sui generis de bases de datos.
En la doctrina existen posiciones que afirman que la mejor manera de prote-
ger los conocimientos dadas sus caractersticas, variedad y riqueza sera
por medio del establecimiento de bases de datos sui generis. Estas bases de
datos se protegeran por el derecho de las bases de datos originales sobre
la seleccin o disposicin de sus contenidos. Para su aplicacin se requiere,
por una parte, la proteccin de la informacin no divulgada y, por otra, que
existan derechos sobre los conocimientos all registrados (GRULAC, 2001).
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 161
Conclusiones
Los pueblos indgenas se ven enfrentados a nuevas amenazas a sus derechos
y soberana permanente sobre sus territorios y recursos. En la prctica, los
Estados por la va de los regmenes comerciales y ambientales van inclinando
la discusin y cerrando los espacios de opciones de proteccin, al incluir en los
TLC y acuerdos comerciales regulaciones relativas a los conocimientos tradi-
cionales, biodiversidad y acceso a recursos genticos. Todos esos mecanismos
tienden a incluir los conocimientos tradicionales y el patrimonio cultural y
ambiental indgena bajo regmenes propietarios. Ello ha implicado, al igual
que en materia de derechos indgenas a la tierra, que el campo de opciones para
los pueblos indgenas se reduzca cada vez ms, y se busca entonces reivindicar
derechos propietarios colectivos sobre el patrimonio cultural e intelectual de
los pueblos indgenas.
Como constata Tony Simpson, la evidencia indica que
los pueblos indgenas se estn volcando a la ley de propiedad intelectual
para proteger su conocimiento, estilos tradicionales, patrimonio cultural
y recursos biolgicos; y que el uso de los pueblos indgenas de la ley no
implica necesariamente su apoyo a estos mecanismos, sino ms bien, es un
resultado del hecho de que existe una creciente presin internacional sobre
162 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
los Estados para que implementen una legislacin nacional que garantice los
derechos de propiedad intelectual y existen pocos intentos de parte de stos
de explorar mecanismos legales alternativos para proteger adecuadamente la
propiedad cultural e intelectual indgena (Simpson, 1997).
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28
Para una discusin sobre los derechos propietarios indgenas, cf. J. Anaya y R. A.
Williams, Jr., (2001); P. Garca Hierro(2004) y Luis Rodrguez-Pinero (2004).
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 163
Captulo V
Introduccin
El propsito central de este ensayo es analizar el probable cambio institucio-
nal en Mxico sobre el conocimiento tradicional, reflexionando las posibles
modificaciones a partir de una serie de temas y conceptos que permitan
comprender su importancia, contexto y especificidad. El escrito se compone
de cuatro secciones.
La primera examina en tres partes algunos efectos del sistema de derechos
de propiedad intelectual sobre la evolucin del sistema de patentes mexicano,
el conocimiento tradicional y la biodiversidad. La primera parte de esta
seccin aborda el proceso institucional de fortalecimiento y profundizacin
de los derechos de propiedad intelectual en Mxico y el mundo. La segunda
muestra algunos efectos de este proceso de homogeneizacin de los derechos
de propiedad intelectual sobre el sistema de propiedad industrial mexicano.
La tercera presenta casos relacionados con la propiedad intelectual, el
conocimiento tradicional y la biodiversidad.
La segunda seccin define la problemtica que enfrenta el conocimiento
tradicional en relacin con las empresas trasnacionales y la biodiversidad.
Se divide en tres partes. La primera define al conocimiento tradicional y
la segunda a las empresas trasnacionales dedicadas a la biotecnologa. La
tercera parte define el modo de relacin entre las empresas trasnacionales y
el conocimiento tradicional.
1
Artculo 7 (ADPIC, OMC, 1995): El objetivo es promover la innovacin tecnolgica
y su transferencia y diseminacin, de manera que conduzca al bienestar social y eco-
nmico y a un balance entre derechos y obligaciones. Los ADPIC cubren los siguien-
tes tipos de derechos de propiedad intelectual: i) patentes; ii) derechos de autor; iii)
marcas y nombres comerciales; iv) denominaciones de origen; v) diseos industriales;
vi) trazado de circuitos integrados; vii) variedades vegetales; viii) secretos industriales.
2
Artculo 27.1 (ADPIC, OMC, 1995): Los microorganismos y los procesos microbiolgi-
cos y no biolgicos sern patentables bajo los ADPIC.
3
En el Artculo 8 (ADPIC, OMC, 1995) se menciona que las excepciones al otorgamiento
de patentes incluyen: i) el Artculo 27.2 que estipula necesario considerar el orden
pblico y la moral, as como proteger la vida humana, vegetal, animal y la salud e
impedir un serio dao al medio ambiente; ii) el Artculo 27.3 que especifica el no pa-
tentamiento de plantas, animales y procesos esencialmente biolgicos; iii) el Artculo
30 que otorga el derecho de limitar los derechos de patente; iv) el Artculo 31 que
instituye cmo una tercera parte podra llegar a usar eventualmente una patente sin la
autorizacin de su propietario.
170 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
7
Una variedad se considera esencialmente derivada si de forma predominante se deriva
de la variedad inicial; es claramente distinguible de la variedad inicial; y salvo excep-
ciones puntuales, expresa las caractersticas esenciales que resultan del genotipo inicial
de la variedad.
172 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
9
Vase J. Aboites y M. Soria (1999).
10
El Tratado de Cooperacin de Patentes (PCT, por sus siglas en ingls) se cre en 1970
y Mxico es miembro desde 1995. Este mecanismo permite patentar, desde el pas
donde reside el titular de una patente, en todos los pases signatarios en los que el
titular considera conveniente patentar. Este mecanismo lo utilizan principalmente
las empresas trasnacionales para registrar desde su pas de origen familias enteras de
patentes.
174 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
11
Estas licencias obligatorias a terceros refieren a las patentes que no son explotadas en
los trminos de la ley o segn las necesidades de la economa de mercado, por lo cual
el Estado podra obligar al titular de la patente a extender una licencia a terceros.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 175
12
Esta convergencia institucional inicia a fines de los ochenta, prosigue en el comienzo
de los noventa y se profundiza hacia mediados de la dcada. Vanse conclusiones en el
apartado El contexto nacional de los derechos de propiedad intelectual (supra).
13
Las patentes primero se solicitan. Si aprueban el examen administrativo y luego el
examen tcnico de novedad, entonces se conceden. Por diversas razones, no todas las
solicitudes se conceden. La solicitud es un indicador de demanda de proteccin de tec-
nologa para la industria realizada por las empresas o individuos. La concesin de
patente es una sancin estatal de novedad tcnica que tiene efectos monoplicos para la
economa en la que se aplica.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 177
Crecimiento
1980-1990 1991-2002 1980-2002
entre periodos
Pas
(1980-1990)
# % # % # % a
(1991-2002)
EE. UU. 223 6.6 1 090 32.1 1 313 38.7 388.8
14
En trminos de su monto este flujo fue marginal comparado con los pases desarrolla-
dos o grandes empresas trasnacionales de biotecnologa. Si se valora este flujo cualita-
tivamente, cada una de estas patentes condensa una serie de datos empricos relevantes
y posiblemente relacionados con casos especficos de transferencia del conocimiento
tradicional y de elementos de la biodiversidad gentica de Mxico.
180 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
15
En el caso de la soya planta originaria de China, la empresa Agracetus obtuvo en
1994 una patente que cubra todas las variedades transgnicas de este producto. Su com-
petidor Monsanto protest y acus a la primera de que su patente careca de novedad.
Sin embargo, despus de adquirir esta empresa, Monsanto se olvid de su protesta y co-
menz a aplicar su patente de la semilla de Soya Round Up Ready, que impide guardarla
como semilla, no puede investigarse y se debe comprar el herbicida asociado producido
por Monsanto. Esta aplicacin de la patente se ha traducido en al menos 475 demandas
contra agricultores por supuestamente guardar y volver a plantar estas semillas sin el
pago de regalas y permisos correspondientes (Grain, 2000, cit. en Kohr, 2003).
16
Una vez liberado al ambiente, un organismo transgnico no se le puede detener porque
los genes transgnicos son dominantes y as pueden contaminar muchos otros orga-
nismos. Con los genes transgnicos no existe la posibilidad de la coexistencia como
con los elementos y organismos naturales. As, si se introducen en Mxico igual co-
mo se introdujeron en Canad, podran destruirse tanto la posibilidad de la agricultura
orgnica, como la agricultura convencional.
17
Durante el proceso jurdico, en palabras del mismo Schmeiser, la primera decisin del
juez quiz fue la ms importante: no importa el mecanismo, de qu manera lleg ese
gen al campo del agricultor, a sus depsitos de semilla [...] Eso no importa, estableci
el juez, y tampoco importa si lleg a sus campos en contra de sus deseos; aunque sea un
agricultor orgnico que no quiere transgnicos, usted ya no es dueo ni de sus semillas
ni de sus plantas, esas plantas pertenecen a Monsanto (Schmeiser, 2002).
18
Tena prohibido utilizar las semillas guardadas para el siguiente ao. Se le impuso
incluso que los ingresos de las parcelas iran a Monsanto, y cualquier planta o semilla
de canola que estuviera en sus campos debera transferirse gratuitamente a Monsanto.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 185
Biocontaminacin y bioinseguridad
El caso anterior ha mostrado que no se puede controlar un organismo
transgnico que se libera en el ambiente.19 En tanto centro de origen y
diversidad de plantas y animales, un tema muy importante para Mxico
es el control de la contaminacin biolgica. Como el viento, los pjaros
y las mariposas mueven el polen de un lado a otro, los genes se mueven
con el polen. Los resultados de Chapela y Quist (2001) demuestran que
en Oaxaca se encontr maz criollo contaminado genticamente.20 En este
trabajo y varios posteriores, se ha demostrado claramente que no existe
control y que el peligro de una contaminacin muy amplia es imposible
de prevenir.21 Esto fue confirmando por la Conabio (2001), organismo
que tiene informacin sobre la presencia de ADN proveniente de plantas
transgnicas de maz en granos sembrados en Oaxaca (Covantes, 2002).22
19
Un reporte de la Union of Concerned Scientists, publicado en Estados Unidos (2004; cit.
en Chapela, 2005), respecto de las variedades comerciales de semillas supuestamente no
transgnicas que compran los campesinos en ese pas indica que 50% de las variedades
adquiridas por los granjeros estaba contaminado. En Mxico ha habido liberacin de
transgnicos por accidentes y por experimentacin desde los aos ochenta, cuando en
Estados Unidos la liberacin estaba todava prohibida comercialmente.
20
Este hecho es grave porque tanto Mxico como Guatemala son los centros de origen
y de diversidad del cultivo de maz. Por otro lado, forma parte sustancial de la alimen-
tacin de la poblacin rural. Cualquier liberacin de plantas transgnicas en centros
de origen y diversidad es una amenaza para la biodiversidad del planeta, la cultura y la
seguridad alimentaria. En un estudio elaborado por cientficos mexicanos y el Conacyt
en 1999, para la Presidencia de la Repblica, se registra que el maz es una especie con
polinizacin cruzada y abierta, el viento es el principal vector del polen por lo que est
claro que los genes de maz transgnicos se movern a las variedades criollas cuando
entren en contacto con ellos (Conacyt y Conabio, 1999, cit. en Covantes, 2002).
21
Es decir, las variedades domesticadas cultivadas durante miles de aos por indgenas
y campesinos mexicanos han sido contaminadas por alguna de las variedades de maz
transgnico disponibles en el mercado. La contaminacin del maz en Oaxaca y Puebla
con la presencia de transgenes en el maz criollo fue de 3 a 13% en algunas muestras.
En otras, dentro de almacenes, hasta 37% de granos analizados contenan transgnicos.
En cuatro localidades oaxaqueas de los valles centrales y de la Mixteca se encontr la
contaminacin ms alta de entre 20 y 60% de las semillas de maz analizadas.
22
Es muy probable que esta misma situacin se est viviendo en Guatemala (Milborn,
2002). Con la finalizacin de la guerra civil el gobierno penetr el medio rural con
programas de apoyo promovidos por Estados Unidos. En stos se facilit y acrecent
la importacin de semillas de maz transgnico.
186 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
23
Soriano, Fernndez y Toledo definen la erosin gentica como el concepto negativo y
complementario del proceso de creacin de diversidad biolgica. Por tanto, el concep-
to de erosin gentica existe junto al de conservacin y generacin de la diversidad en la
naturaleza.
24
Paradjicamente, la misma naturaleza monoplica de los derechos de propiedad inte-
lectual es causa de la bioerosin. Los beneficios extraordinarios que espera la empresa
de la comercializacin masiva de su innovacin tecnolgica en forma de semilla, se
derivan de su aplicacin industrial como monocultivo. Por tanto, la expansin masiva
por va del monocultivo de las nuevas variedades de plantas y OGM, que cuentan con
el monopolio tecnolgico de propiedad intelectual, es causa directa de la prdida de la
biodiversidad gentica dentro de determinados sistemas ecolgicos. As, con su libera-
cin, los OGM se constituyen en una fuente de bioinseguridad.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 187
Conocimiento tradicional
La principal caracterstica del conocimiento tradicional es su diversidad,
debido a cmo se genera en las comunidades de diferentes pases y en una
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 189
D ia gr a ma 1: R ela cin entr e los a gentes del C onocim iento T r a d ic iona l y tecnolgico sobr e biodiver s ida d en M x ico
Diagrama 1 Iniciativas de ley sobre el conocimiento tradicional
I mpulso de C onser vacin I mpulso de M er cado
Biopiratera
B iopiratera
C onocimiento T r adicional Demandan, Conocimiento
D emandan ,
Conocimiento Tradicional Tradicional y Recursos
Conocimiento Biolgicos
Tradicional y
de las
deClas
omunidades
Comunidades Indgenas y Genticos para producir
Recursos Biolgicos y Genticos
y A grarias:
Indgenas y Agrarias: Conocimiento
para Tecnolgico
producir Conocimiento
Bienestar social yy natural,
B ienestar social natural, Patentado
T ecnolgico Patentado
Propiedad
Propiedad colectiva
colectiva Bioextorsin
B ioextorsin E mpresas de
B iotecnologa
T rasnacionales y
Sistema M undial de
Propiedad
Intelectual
BBiodiversidad
iodiver sidad yy
BBioerosin
ioE rosin
M edio Ambiente
Medio A mbiente L iber an al
Liberan al Medio
MedioAmbiente
Ambiente
Global
G lobal yyLLocal;
ocal; Nuevas
NuevasVariedades
VariedadesdedePlantas
Plantas yy
Sustento paraconservar
S ustento para conservar Organismos
OrganismosGenticamente
Genticamente
Modificados
Modificados con
con fin
fin de
de ganancia
ganancia
la vida humana
la vida humana Biocontaminacin
B iocontaminacin derivada de mercado monoplico
(Estado derivada de mercado monoplico
(E stado NNacin)
acin)
26
La iniciativa central consiste en una propuesta de ley aprobada por la Cmara de
Senadores, la cual ya se encuentra en la antesala de anlisis y discusin dentro de la
comisin respectiva de la Cmara de Diputados.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 195
Diagrama
Diagrama2:2Iniciativas
IniciativasdedeLey
leysobre
sobreelelConocimiento
conocimientoTradicional
tradicional
Disposiciones generales
Define objeto de la ley, sujetos, objetos, proteccin de derechos intelectuales,
actos de los sujetos y necesidad de los pueblos indgenas de recurrir a la
jurisdiccin del Estado para hacer valer estos derechos. Dos comentarios al
respecto.
Primero, es importante contrastar y discutir la definicin del objeto
de la Ley, de los sujetos y los objetos que contiene, el alcance de la pro-
teccin de derechos intelectuales, detallar los actos indebidos de los sujetos
relacionados con el conocimiento tradicional, y compararlo todo con otras
concepciones (Simpson, 1997; Kohr, 2003). Por ejemplo, existen diferen-
tes alcances y perspectivas de la ley, segn se utilice uno u otro concepto:
derechos consuetudinarios o derecho tradicional; indgenas en sentido
amplio o indgenas en sentido estricto; pueblos con autodeterminacin
5/XII/2003). La iniciativa actual fue suscrita por el diputado ngel P. Canul Pacab del
PRI y publicada en la Gaceta Parlamentaria, ao VII, nmero 1437, mircoles 18 de
febrero de 2004.
28
Entre otras experiencias, recurdese el Registro Nacional de Transferencia de Tecno-
loga (RNTT, 1974-1991), el cual tena por objeto registrar en Mxico la tecnologa
producida y transferida o importada en territorio nacional. Al calor de las reformas
orientadas a impulsar el mercado nacional en funcin global, desapareci mediante
su derogacin en la Ley de Fomento y Proteccin de la Propiedad Industrial (Secofi,
1991). Este registro era interesante en cuanto al tipo de informacin registrada por las
empresas trasnacionales y era utilizado, adems, como un instrumento de intervencin
del Estado en materia del desarrollo de tecnologa. Si bien la aplicacin institucional
de este mecanismo no fue la ms adecuada, tanto por problemas de diseo como por
los de tipo poltico, actualmente los archivos del RNTT han desaparecido en tanto
informacin histrica.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 197
Segundo, son tan diversas las culturas indgenas dentro de Mxico, que
difcilmente un solo registro puede codificar realmente el conocimiento tra-
dicional tan diverso. Cmo codificara y administrara el Estado mexicano
algo que no conoce, que est en otra lengua, que refiere a otra cosmovisin?
La recomendacin actual en la OMPI es no impulsar todava de manera
general el registro de conocimiento tradicional debido a que existen dudas
sobre la efectividad de un registro para protegerlo en la realidad. En efecto, el
peligro que entraa el registro es que conforme se codifica el conocimiento
tradicional se facilita y difunde informacin valiosa. Aunque por otra parte,
tambin es cierto que un registro facilitara el combate a la biopiratera. Sin
embargo, es preferible empezar este tipo de registro con aquel conocimien-
to tradicional que ya se encuentra codificado. Por ejemplo, el relativo a la
medicina tradicional en ciertas regiones, o entre ciertos pueblos indgenas,
ya ha sido objeto de registro sistemtico a partir de publicaciones o bases
de datos ad hoc.
Tercero, en todo caso, las comunidades que desean registrar su cono-
cimiento tradicional como conocimiento explcito en una base de registro
documental o electrnica tendran la libertad para hacerlo por su cuenta y
con sus reglas y conocimientos, sin la intervencin, aunque s con el apoyo,
del Estado y/o el sector social y/o privado o las universidades y/o especia-
listas y tcnicos.
Contratos de licencia
La transferencia de conocimiento tradicional es el elemento al cual la iniciativa
de ley le otorga la mayor importancia. Esta iniciativa promueve bsicamente
la transferencia de conocimiento tradicional junto con el reparto equitativo
de los beneficios, estipulndolos mediante contratos. En este aspecto, la
intervencin del Estado es significativa en todo el procedimiento, desde la
autorizacin de procesos de bioprospeccin y la formulacin del consenti-
miento informado hasta el registro o validez del contrato.29
En este contexto, cabe el comentario general de que si en un con-
trato cualquiera se llega a un acuerdo por un tipo de intercambio, entre
los sujetos o partes existe una asimetra evidente. Mientras las empresas
29
Esto mismo sucede con la Iniciativa de Ley de Acceso y Aprovechamiento de Recur-
sos Genticos (vase infra).
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 199
Sanciones
Las sanciones a la violacin de los derechos de propiedad intelectual por
cualquier pas son de gran magnitud, segn lo establecido por los ADPIC
de la OMC. Cabra preguntarse si son de igual magnitud o relativamente
comparables las sanciones de esta ley del conocimiento tradicional. Esto es
de suma importancia, ya que el poder de los ADPIC estriba en parte en la
magnitud de las sanciones que se pueden imponer legalmente.
30
Presentada por el diputado Rafael Garca Tinajero P. del PRD (versin de la Cmara de
Diputados, marzo 15, 2005).
31
Tambin es importante revisar la redaccin particular de la adicin. Falta precisar me-
jor qu es lo que se protege.
202 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
32
Que versa sobre el registro como derechos de propiedad intelectual a las patentes, los
diseos industriales, los conocimientos secretos, las marcas, los nombres comerciales y
las denominaciones de origen. Incluye el registro o reconocimiento legal de los circui-
tos integrados y los derechos de obtentores vegetales. Estos ltimos conceptos refieren
a regmenes de registro sui generis, en el sentido de que no pueden registrarse dentro
del sistema de patentes como tal.
33
Iniciativas presentadas por los senadores del PAN, LVIII Legislatura, 30 de abril de 2003.
Saln de Sesiones de la H. Cmara de Senadores a 29 de abril de 2003. Senadora Luisa
Mara Caldern Hinojosa.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 203
34
Reformas contenidas en la iniciativa del PRI en la Gaceta Parlamentaria, ao VII, nme-
ro 1437, mircoles 18 de febrero de 2004.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 205
dad. Por el contrario, llama la atencin la reforma del artculo 93, en el cual
se limitan las prcticas y los volmenes de aprovechamiento de ejemplares,
partes o derivados de vida silvestre para ceremonias y ritos tradicionales por
parte de integrantes de comunidades rurales.36
En general, las reformas a esta ley indican la estrecha relacin entre el
conocimiento tradicional y la biodiversidad.37 Por ende, el cambio institucional
respectivo debe tener un carcter integral: como el conocimiento tradicional
existe vinculado a la biodiversidad, no puede protegerse plenamente sin
regular de forma adecuada el acceso a recursos biolgicos y genticos y a la
bioseguridad del medio ambiente.
36
Artculo 93 (reforma): La Secretara, en coordinacin con la Comisin Nacional para
el Desarrollo de los Pueblos Indgenas y las Entidades Federativas, integrar y har p-
blicas, mediante una lista, las prcticas y los volmenes de aprovechamiento de ejem-
plares, partes o derivados de vida silvestre para ceremonias y ritos tradicionales por par-
te de integrantes de comunidades rurales, el cual se podr realizar dentro de sus predios
o con el consentimiento de sus propietarios o legtimos poseedores, siempre que no
se afecte la viabilidad de las poblaciones y las tcnicas y medios de aprovechamiento
sean las utilizadas tradicionalmente, a menos que stos se modifiquen para mejorar las
condiciones de sustentabilidad en el aprovechamiento. En todo caso promover que
se incorporen acciones de manejo y conservacin de hbitat a travs de programas de
capacitacin a dichas comunidades indgenas y rurales.
37
Vase Carlos Gonzlez Garca, et al. (2002).
38
Gaceta Parlamentaria, Senado de la Repblica, nm. 111, ao 2005, mircoles 27
de abril, 2. ao de ejercicio; vase el Dictamen de las Comisiones Unidas de Salud
y Seguridad Social; de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Pesca; y de Estudios
Legislativos del Segundo Periodo Ordinario.
39
Artculo 4: En los casos en que existan conocimientos y prcticas tradicionales aso-
ciados a los recursos genticos a los que se desea acceder, stos sern respetados y pro-
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 207
tegidos dentro del mbito de esta ley y de conformidad con los ordenamientos legales
aplicables. Esta iniciativa de ley propone hacer una diferencia en la definicin del
conocimiento en el artculo 10, fraccin XI: Conocimiento relevante: Conocimiento
que resulta estratgico para el aprovechamiento de un recurso biolgico o gentico,
es distinto de Conocimiento Tradicional: Conocimientos, innovaciones y prcticas,
desarrolladas y conservadas de forma colectiva o individual por agricultores, mdicos
tradicionales, pueblos indgenas, ejidos, comunidades y dems personas que entraen
estilos tradicionales de vida pertinentes para la conservacin y la utilizacin sustenta-
ble de la diversidad biolgica.
208 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
Principales hallazgos
Derechos de propiedad intelectual y el sistema mexicano
de propiedad industrial
Un primer conjunto de hallazgos refiere al impacto directo del fortaleci-
miento de los derechos de propiedad intelectual sobre la evolucin reciente
del sistema de propiedad industrial mexicano. La evolucin actual indica
lo siguiente:
Primero: una significativa multiplicacin y predominio del registro de patentes
solicitadas y concedidas con base en la expansin del registro por las
empresas trasnacionales en Mxico mediante el Tratado de Cooperacin
de Patentes (PCT, por sus siglas en ingls).
Segundo: en contraste, el registro de patentes por mexicanos se contrajo de
manera significativa; en especial la concesin de patentes domsticas,
la cual mantiene una posicin marginal.
Tercero: destacan por su acelerado crecimiento las patentes del sector asociado
a la farmacutica y la biotecnologa, principalmente por las empresas
Esta ley fue aprobada el 18 marzo de 2005. Ha sido cuestionada por diversos espe-
40
contexto del mercado dada su creciente demanda por las empresas trasna-
cionales y la industria moderna de la biotecnologa.
El impulso de conservacin
La iniciativa de ley no slo no propone los mecanismos especficos que tendrn
los pueblos y las comunidades para hacer efectiva la proteccin propuesta
anteriormente. Por el contrario, no contribuye a fomentar la conservacin
de la biodiversidad y el conocimiento tradicional. Existe una ausencia de
medidas concretas relacionadas con los diferentes mbitos involucrados
(derechos indgenas, derechos campesinos, derechos ambientales, etctera).
En este sentido, la ley tampoco le otorga al conocimiento tradicional de los
pueblos indgenas y comunidades locales y campesinas el papel protagnico
en materia de conservacin y bioseguridad que en realidad desempean a
diario.
Entre las medidas ms importantes para impulsar la conservacin de
la biodiversidad y el conocimiento tradicional est una visin integral de
los derechos humanos y ambientales. En efecto, una proteccin plena del
conocimiento tradicional es inviable si no se consideran cambios ms pro-
fundos en las diferentes legislaciones relativas a la biodiversidad: acceso a
la biodiversidad, bioseguridad, vida silvestre, semillas, equilibrio ecolgico,
etctera.
Asimismo, la proteccin es dbil si no existe el reconocimiento jur-
dico a escala del Estado mexicano de los derechos de autodeterminacin
y territoriales de los pueblos indgenas y de los derechos de los agricultores
y fitomejoradores tradicionales. Adicionalmente, los alcances de los derechos
de propiedad intelectual, como las patentes y los registros de nuevas varieda-
des de plantas, han de ser delimitados en trminos de ciertas prohibiciones
y lmites en el campo de organismos vivos. El registro del conocimiento
tradicional en bases de datos puede contribuir a la conservacin conforme
sea la comunidad quien ejerza la propiedad sobre dicho conocimiento y as
lo registre, administre y transfiera.
Finalmente, no existen subsidios directos por causas de utilidad p-
blica para las regiones en donde se genera el conocimiento tradicional y
se conserva la biodiversidad. En este sentido, dada su importancia para la
218 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
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220 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
(Contina...)
Anexo 1
Iniciativa de Ley de Proteccin de los
Conocimientos Tradicionales en Mxico, 2005
(...Continuacin)
(Contina...)
Anexo 3
Diversas modificaciones a leyes federales
necesarias para establecer la legislacin sobre
(...Continuacin)
II. Iniciativa de reformas y adiciones a la Ley de la Comisin Nacional
para el Desarrollo de los Pueblos Indgenas, 2004
Artculo 21. La Comisin constituir y administrar, a travs de
un Comit integrado por representantes indgenas miembros del
Consejo Consultivo, el Fondo Nacional para la Conservacin
Se crea de los Conocimientos Tradicionales, de conformidad con lo
el Artculo 21 dispuesto en la Ley General sobre la materia. Los recursos del
Fondo Nacional se aplicarn exclusivamente en la realizacin
de todas aquellas acciones encaminadas a la conservacin de los
Conocimientos Tradicionales de los pueblos indgenas.
Primero. El Registro Nacional de Proteccin a los Conocimientos
Tradicionales y el Fondo Nacional para la Conservacin de los
Conocimientos Tradicionales se constituirn dentro de los seis
meses siguientes a la publicacin del presente Decreto en el
Diario Oficial de la Federacin. La Comisin Nacional para el
Desarrollo de los Pueblos Indgenas promover la participacin
de instituciones acadmicas e instituciones pblicas en este
Transitorios proceso.
Segundo. La Junta de Gobierno expedir, dentro de los tres me-
ses siguientes a la publicacin del presente Decreto en el Diario
Oficial de la Federacin, los Reglamentos Internos del Registro
Nacional de Proteccin a los Conocimientos Tradicionales y del
Fondo Nacional para la Conservacin de los Conocimientos
Tradicionales.
Fuente: elaboracin propia a partir de las iniciativas de Ley, Mxico, 2005.
Anexo 4
Iniciativas de reforma, adicin y/o derogacin de fracciones
o prrafos de diferentes legislaciones de Mxico
en relacin con el conocimiento tradicional,
el medio ambiente y la biodiversidad
1. Iniciativa con Proyecto de Decreto que Reforma
y Adiciona la Ley General de Vida Silvestre
Para los efectos de esta Ley se entender por: ...VII Bis. Comu-
Artculo 3 nidades indgenas: son aquellas que forman una unidad social,
(Se adiciona) econmica y cultural, asentadas en un territorio y que reconocen
autoridades propias de acuerdo con sus usos y costumbres.
el papel de los pueblos indgenas como uno de los principales actores para la
conservacin y el desarrollo sustentable.
As, el presente trabajo se centrar en la reevaluacin de la importancia
de los pueblos indgenas para la sociedad en su conjunto, lo cual implica
repensar las polticas territoriales por parte de los pueblos indgenas y sus
organizaciones, as como las polticas pblicas dirigidas desde el Estado.
De igual forma, la crisis ambiental debe ser entendida sobre una base de
aproximaciones diferenciadas segn la evaluacin de un amplio espectro de va-
riables energticas, culturales, sociales, econmicas, polticas y ecolgicas.
Por ello, la interaccin entre las ciencias sociales y biolgicas adquiere gran
relevancia para acercarnos a estos complejos sistemas.
Cientos de trabajos cientficos se han centrado en documentar el cono-
cimiento ecolgico tradicional, mismos que se refieren a tecnologas, conoci-
mientos y experiencias sobre los recursos naturales, instituciones de acceso y
prcticas simblicas al interaccionar con la naturaleza.
En un estudio reciente, Maffi L. (2001) seala la correlacin global
que existe entre la diversidad de lenguas endmicas con la megadiversidad
biolgica; as, diez de los pases megadiversos son parte de los 25 pases con
mayor nmero de lenguas indgenas. El mismo estudio propone la posibili-
dad de que fenmenos ecolgicos en pequea escala se deban a esta relacin
de la diversidad biolgico-lingstica, en donde las poblaciones adaptan sus
culturas a las especificidades ambientales y transforman el ambiente a partir
de sus conocimientos.
En las ltimas dcadas, estudiosos de mltiples disciplinas han insistido
en la asociacin de la prdida de especies biolgicas, de la funcionalidad de los
ecosistemas y de la reduccin de su capacidad para generar servicios ambientales
bsicos, con el deterioro de las culturas y los grupos lingsticos. En efecto, nos
referimos en este trabajo a los pueblos indgenas que estn asentados en uno de
los territorios con la ms alta diversidad biolgica del mundo.
Si bien varios autores se han referido a la prdida de la diversidad
biolgica (Harmon, 2001), es menos conocida la relacin entre la prdida
de las especies y el deterioro de las lenguas y las culturas del mundo. Se
estima que actualmente existen ms de seis mil lenguas orales en el planeta,
sin embargo, varias pertenecen a comunidades relativamente pequeas, en
riesgo de perderse. El caso de Mxico es especialmente importante en esta
discusin, ya que todas las lenguas de los pueblos indgenas son endmicas
y se localizan en regiones geogrficas determinadas, por lo que representan
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 239
niebla (con tres mil especies), y 25 % de los bosques templados (con siete mil
especies). Esta correlacin gruesa de especies estimadas por Rzedowski (1998)
para estos biomas, nos permite reconocer que los indgenas de Mxico son
uno de los grupos nativos con mayor diversidad biolgica en el mundo.
El Estado mexicano ha creado varios mecanismos para la proteccin de
la diversidad biolgica, entre ellos el Sistema Nacional de reas Naturales
Protegidas, que para finales de 2004 tena 17 247 978 hectreas registradas
bajo algn tipo de proteccin. Sin embargo, slo en 40 reas protegidas
que suman 4 975 654 ha hay presencia indgena. Los territorios indgenas
dentro de estas 40 reas protegidas representan 24.9% de la superficie total,
con 1 239 092 has. La pregunta obligada es si los indgenas participan en esa
proporcin en la toma de decisiones de las reservas.
El Sistema Nacional de reas Naturales Protegidas est diseado para
proteger la diversidad alfa. Sin embargo, en nuestro pas domina la diversidad
beta ,1 lo que obliga a repensar las polticas de conservacin. A esta discusin
habra que incorporar otro hecho ms: un modelo de conservacin y desarrollo
que integre a los pueblos indgenas debe considerar que stos han interac-
cionado con dichos paisajes en largas escalas de tiempo. Esta experiencia
obliga a generar un modelo social de conservacin distinto y complementario
a las diferentes modalidades que consigna el Sistema Nacional de reas
Naturales Protegidas (Sinanp). Las formas de conservacin bajo la batuta
campesina e indgena seran una respuesta excelente al requerimiento de
proteger la diversidad beta. Las iniciativas de conservacin comunitarias, el
aprovechamiento sustentable de los bosques comunitarios (o de propiedad
social) y de las selvas son nuevos modelos de conservacin y desarrollo en donde
la apropiacin social de los recursos naturales fortalece a las comunidades
indgenas. Este modelo ha avanzado en los ejidos y las comunidades forestales
de Quintana Roo, Oaxaca, Guerrero, Michoacn, Durango y Chihuahua,
1
La diversidad alfa es una funcin de la cantidad de especies presentes en un mismo h-
bitat, y es el componente de la diversidad ms importante (y ms comnmente citado)
de las selvas tropicales hmedas y de los arrecifes coralinos, por ejemplo. La diversidad
beta es una medida del grado de particin del ambiente en parches o mosaicos biolgi-
cos, es decir, mide la contigidad de hbitats diferentes en el espacio. Este componente
de la biodiversidad se utiliza tambin para caracterizar el manejo de policultivos y en
sistemas agrosilvcolas de uso mltiple. En estos sistemas manejados se busca compen-
sar la menor diversidad alfa de los cultivos con un incremento de la heterogeneidad
espacial o diversidad beta.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 243
(Contina...)
Cuadro
252 1. Captura
Centro de Estudiosde
paraagua en territorios
el Desarrollo de los ypueblos
Rural Sustentable indgenas
la Soberana Alimentaria
(...Continuacin)
Porcentaje
Captura Captura
de captura
de agua en de agua en
de agua
millones millones de
Cuencas Pueblo indgena en la
de m3 de la m3 en los
cuenca por
totalidad de territorios
territorios
la cuenca indgenas
indgenas
Chol, Chontal de
Ro Chixoy Tabasco, Tseltal, 33 890.61 9 187.00 27.11
Maya Lacandn
Chinanteco,
Mame, Chol,
Chuj, Kanjobal,
Ro Lacantn 34 935.28 24 972.35 71.48
Maya Lacandn,
Tojolabal Tseltal,
Tsotsil, Zoque
Ro Pijijiapan
Tseltal, Tsotsil 6 234.47 4 255.50 68.25
Y otros
Baha de Chol, Kekch,
Chetumal Kanjobal, Maya, 20 037.10 4 255.50 21.24
y otros ahs
Cuencas
Maya, Chol 26 486.63 17 798.40 67.2
Cerradas (B)
Quintana Roo Maya 18 604.19 13 590.60 73.05
Yucatn Maya 45 144.77 38 980.80 86.35
Cuenca
Maya 11 310.32 3 786.93 33.48
Cerrada (A)
Ro
Maya, Kanjobal,
Champotn 16 899.92 4 520.00 26.75
Quich, Tseltal
Y otros
electricidad a largo plazo est en riesgo, ya que las presas pierden su capacidad
tanto de almacenamiento como para proveer agua a los sistemas de riego en
las planicies.
Los riesgos hdricos son mayores en estas zonas. El mapa de riesgos por
altas precipitaciones extraordinarias (como son la entrada de huracanes) nos
seala la urgencia de mantener los ecosistemas serranos lo ms sanos posible
para mitigar los eventos extraordinarios como los vividos en la ltima dcada en
la Sierra Norte de Puebla, norte y sur de Veracruz, Oaxaca, Chiapas y Tabasco.
3
Ortega y Turrent (2004), comunicacin verbal.
262 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
Cambio Cambio
Porcentaje Porcentaje
de de
% cubiertas cubiertas
Uso del suelo cobertura Total cobertura
Serie II Serie III vegetales vegetales
en los % vegetal Serie Total Serie vegetal
Serie II respecto 2004 serie II serie III
territorios Serie en II 1994 III 2004 en
1994 al total has. en en
de los pueblos III hectreas nacional nacional hectreas
territorios indgenas territorio territorio
indgenas respecto a respecto a
indgenas nacional nacional
la serie II la serie II
(1994) (2004)
indgenas nacional
Pecuario
(pastizal
-
inducido
2 528 769 10.5 2 724 923 11.3 196 154 17 490 418 18 930 653 9.01 9.7
y cultivado,
vegetacin
sabanoide)
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural
Agrcola 2 604 739 10.8 2 863 500 11.9 258 761 29 082 270 30 074 408 992 138 14.97 15.1
Plantacin
10 421 0 12 527 0.1 2 106 25 464 31 876 6 412 0.01 0
forestal
-
Totales 5 143 929 21.3 5 601 589 23.2 457 660 46 598 152 48 314 540 23.9 24.9
265
266 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
La ilustracin contiene dos grficas: una que es sealada con la leyenda de semillas tradicionales y otra con
las llamadas semillas milagrosas o de alto rendimiento de la revolucin verde, ahora distribuidas princi-
palmente por compaas trasnacionales. La coordenada y representa el rendimiento por hectrea mientras
que la x las variaciones climticas. Si comparamos las dos grficas tenemos que las semillas hbridas o
milagrosas se desenvuelven bien en condiciones agronmicas muy favorables (clima, riego, suelo, fertilizantes),
pero que decaen rpidamente en cuanto no se presenten las condiciones ambientales ptimas. En cambio,
las semillas campesinas indgenas tienen una capacidad de adaptacin mayor a las condiciones extremas y
a los microhbitats.
270 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
maz. Los pueblos indgenas y las comunidades campesinas con sus agroeco-
sistemas tradicionales tienen los reservorios de germoplasma mesoamericano
ms importantes del pas cuyo valor no es reconocido por la sociedad en su
conjunto. Este patrimonio representa los recursos biolgicos colectivos de
los pueblos indgenas claves para la conservacin in situ y el desarrollo del
pas en el siguiente sentido:
1) La conservacin in situ de los maces indgenas no slo responde a la
necesidad de enfrentar con el acervo gentico situaciones adversas
actuales y futuras para el sistema alimentario nacional y mundial (ej.
nuevas situaciones por el cambio climtico global, megaplagas, etc.);
sino que los maces estn adaptados a condiciones ambientales desfavora-
bles que se podran intensificar con el cambio climtico global.
2) Las tradiciones y el conocimiento de los pueblos indgenas radican
principalmente en la cultura del maz. La diversidad de las variedades
de los maces indgenas se refleja en el gusto culinario popular (colores,
textura, sabor, usos, etc.).
3) Es fundamental reconocer los recursos genticos, los saberes y los
conocimientos del maz y de la agrobiodiversidad para la supervivencia
de los pueblos indgenas, la autosuficiencia alimentaria y la soberana
nacional (Ortega, 2003a).
Los territorios de los pueblos indgenas son de mayor inters. Gran parte de los
acervos del germoplasma ha sido evaluada desde el punto de vista agronmico
(Muoz, 2003), sin embargo, por la estructura y diseo de las investigaciones
no se cuenta con catlogos descriptivos de las muestras individuales (Ortega,
1991).
En un trabajo reciente sobre prehistoria, diversidad, origen gentico
y geogrfico (Muoz, 2003), se da cuenta de los estudios del potencial
productivo de varias razas de maz en un comparativo en condiciones
iguales y favorables con los maces hbridos usados en las mismas regiones.
Los fitomejoradores(as) indgenas tienen otros criterios de seleccin (cultu-
rales y por su uso) que los fitomejoradores de las empresas comerciales o
de los centros de investigacin no consideran, pues estn empeados
principalmente en mejorar el rendimiento y la dependencia comercial hacia
ellas. En este trabajo se documenta la superioridad de las variedades nativas
por su adaptacin a los agroecosistemas porque: a) es ms probable encontrar
estas variedades de alta concentracin especfica adaptadas a las condiciones
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 275
6
El Centro de Investigacin de la Fundacin Swaminathan en India ha desarrollado
toda una estrategia de conservacin ex situ e in situ en que se llega a acuerdos con las
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 277
El Teocintle
Poblaciones de teocintle an existentes se reportan en Chihuahua, Durango,
Jalisco, Nayarit, Colima, Michoacn, Guerrero, Morelos, Estado de Mxico,
Guanajuato y Oaxaca (Snchez y Ordaz, 1987).
Frecuentemente este acervo gentico, de riqueza invaluable, es conside-
rado por los productores como maleza o es utilizado como forraje. Sin
embargo, el naturalista Lumholtz (1902), a finales de siglo XIX, observ cmo
en el occidente de Mxico los coras o huicholes sembraban el teocintle junto
con el maz para mejorar las cosechas. Segn Miranda (1966), esta misma
del maz y la tcnica del cultivo que han hecho los habitantes de los diferentes
climas del territorio mexicano.
El inventario de lugares en territorio indgena donde se han recolectado
las muestras de maz nativo no es exhaustivo, pero nos puede dar una idea
aproximada de qu podemos encontrar en los territorios de los pueblos
indgenas. Asimismo, hay varios lugares en donde se encuentra maces nativos
cultivados por indgenas campesinos con cultura mesoamericana, pero que no
pertenecen a los territorios descritos. Por ejemplo, la raza pepitilla se encuentra
en varios pueblos con hablantes de lengua nahuas en Morelos, sin que stos
sean mayoritarios en sus comunidades.
Encontramos ciertas asociaciones de razas de maz con pueblos indgenas.
El grupo de razas denominadas alianza Balsas Occidente de Mxico con razas
como el harinoso de Nayarit, tabloncillo de Jalisco, maz ancho y conejo
de Guerrero, olotillo de Chiapas, bolita, chatino, maizn y zapalote chi-
co de Oaxaca se distribuyen a lo largo de las reas de los pueblos indgenas
de la familia otomangue. La coincidencia geogrfica entre esta familia y las
razas sugiere que compartieron una historia cultural y biolgica comn. Esas
razas tambin insinan que el maz fue domesticado por antepasados que
hablaban lenguas antecesoras del otom, matlazinca, tlapaneco, amuzgo y
zapoteco, entre otras. El lxico ms rico alrededor del maz lo tenemos en la
protolengua del otomangue. Segn este enfoque, las razas nal tel de Yucatn
y chapalote de Sinaloa no son las ms primitivas como se pensaba. El rbol
filogentico sugiere, ms bien, que las razas tabloncillo, maz ancho y pepitilla
son ms antiguas. El grupo de los maces de los altiplanos centrales (arrocillo,
cacahuacintle, cnico chalqueo y palomero toluqueo) son clasificados
como cnicos y existan por lo menos desde el primer siglo de nuestra era
(Benz, 1997).
El Mapa 2 presenta los sitios de colecta del teocintle del Balsas y
de las razas ms antiguas. Segn este mapa, hoy se encuentran asociadas
geogrficamente esas razas con el teocintle, lo que nos indicara una
permanencia de por lo menos siete mil aos. Esta presencia concuerda con
localidades campesinas, como los pueblos indgenas nahuas de la Sierra de
Puebla y el altiplano, en especial de Morelos y Guerrero, as como otomes,
purhpechas y mazahuas.
El inventario de los maces en territorios indgenas permite documentar
las adaptaciones que hicieron los productores en condiciones agroecolgicas
extremas como la sequa o la abundancia de lluvias, las altas o bajas temperaturas
280 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
Razas Teocintle
Nmero
Situacin de las razas para 2003 Raza
de razas
Casi extinta Tehua 1
Pepitilla, jala, chapalote,
Peligro de extincin zapalote grande, zamorano, 6
vandeo
Palomero, toluqueo,
palomero de Chihuahua,
Frecuencia rara en reas amplias de
apachito, blando, chiquito, 9
Mxico (poblaciones muy reducidas)
naltel, tepecintle, dulcillo del
noroeste y conejo
Distribucin restringida 3
Distribucin amplia 9
Dominantes en su rea de distribucin 9
Dominantes que han sido desplazados
Celaya, tuxpeo y tuxpeo
por los maces mejorados en las 4
norteo
mejores tierras
El panorama anterior nos refleja una dinmica que est ligada a las polticas
pblicas de sustitucin de maces y a la intervencin en el creciente mercado
de las compaas trasnacionales con sus semillas patentadas. No existe poltica
pblica alguna para apoyar, sistemticamente y a largo plazo, la conservacin
in situ de las variedades originales pactada con los campesinos indgenas o
comunidades locales.
En la parte introductoria nos referimos a las polticas pblicas respecto
al maz y cmo stas han atentado contra la economa campesino-indgena,
principal portadora del germoplasma indgena. La erosin gentica es la pr-
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 283
El mismo autor nos dice que despus del Tratado de Libre Comercio (TLC)
la prdida de las poblaciones nativas de maz se ha incrementado, as como
el apoyo gubernamental de las harinas nixtamalizadas, ya que las variedades
locales no encuentran mercado o sufren precios castigados. Importar maz
sin aranceles es un crimen contra los campesinos y un duro golpe contra las
poblaciones nativas de este producto.
La pregunta obligada sera: qu segmentos de la poblacin siguen
reproduciendo los maces nativos? Planteamos aqu que son los campesinos
indgenas y pobres de la economa de subsistencia los que mantienen el germo-
284 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
plasma nativo por razones culturales, sociales y econmicas. Esto, sin embargo,
es temporal, pues la poblacin que sostiene este tipo de germoplasma est
envejeciendo rpidamente, mientras que los jvenes estn migrando. En
resumen, segn Ortega:
Los maces indgenas sustituidos son de excelente calidad y se desenvolvan
en tierras tanto de riego como de temporal de buenas condiciones, pero
paradjicamente son muy vulnerables ante la competencia de maces
hbridos comerciales.
El uso de la variedad chalqueo prcticamente se perdi porque su
cutcula era muy dura, segn las compaas que procesan el maz para la
produccin de tortilla.
Los maces de color o variedades como el pepitilla de muy buena
calidad pero ligero, se fueron extinguiendo de reas importantes por
las polticas pblicas de comercializacin. Mientras tanto, la economa
agrcola subsidiada en el sureste de Estados Unidos reporta un crecimiento
importante de siembra de maces de color y blanco de variedades ind-
genas mexicanas, dirigidas principalmente a los consumidores mexicanos
de Estados Unidos (Barkin, 2003:156).
Gran parte de los acervos del germoplasma indgena han sido evaluados
desde el punto de vista agronmico,9 sin embargo, por la estructura y
diseo de las investigaciones no se cuenta con catlogos descriptivos de
las muestras individuales, por ello se pierden experiencias de investigacin
muy valiosas.
El mismo autor, citando a Brush (1995:352), seala que las pobla-
ciones locales de los cultivos adaptados a condiciones ptimas son
particularmente vulnerables a desaparecer. Es precisamente en estas
reas en donde se sustituyen las variedades indgenas por las llamadas
semillas mejoradas.
En los ltimos 50 aos se perdieron poblaciones de las razas Celaya
(Bajo y llanos de Jalisco), tuxpeo (propio del trpico de temporal en
suelos roturados y en algunas reas subtropicales de riego) y el tuxpeo
norte (adaptado a las regiones subtropicales secas del norte del pas).
Siguiendo a los autores citados, parece que la raza Vandeo ha sido
desplazada por la tuxpea, y el tepecintle sustituido por cafetales. Un
9
Un estudio reciente sobre la evaluacin de los maces indgenas o nativos fue publicado
por Abel Muoz (2003).
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 285
El Cuadro 8 nos permite vislumbrar, a grandes rasgos,10 las razas raras de maz
que estn en peligro de extincin, segn Ortega.
La raza pepitilla es la ms cercana desde el punto de vista gentico al
teocintle del Balsas, segn el rbol filogentico que refieren Iltis y Doebley.
10
Los sitios de recoleccin que nos presenta el CIMMyT no fueron escogidos para ser
representativos respecto de los usos de las razas de maz relacionados con los pueblos
indgenas. Asimismo, no hay visitas nuevas a los mismos sitios para renovar el germo-
plasma, o bien para corroborar si todava existe esa raza o bien si ha sido desplazada.
Como recurso del mtodo se asocia el lugar de recoleccin con el territorio indgena
ms cercano, as como la presencia de indgenas en el sitio, de tal manera que las pro-
babilidades de que todava existan estas variedades son muy altas.
286 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
S. J.B.
S.J.B. Atlatlaucan 1970 Chinantecos
Vandeo Atlatlaucan
Alcal 1961 Tsotsiles
Alcal
Tuxtepec 1944 Chinantecos,
-
Chahuites 1972, 1999 Mazatecos
-
Cintalapa 1972 Zapotecos
-
Frontera 1972 Presencia choles,
-
Comalapa 1944 Zoques
Zapalote -
Bella Vista 1972 Mame
grande -
Tanapatepec 1972 Mame
-
Tonal 1972 Presencia zapoteca
-
Villaflores 1946 Presencia zapoteca
Escuintla
Escuintla 1972 -
-
Ocozocuautla Tsotsiles, mames
Jala
Jala 1952, 1961,
Sta. Mara el Presencia huicholes
Sta. Mara el Oro 1968
Oro Huicholes
Jala San Pedro 1951
San Pedro Huicholes
Lagunillas 1944
Lagunillas Presencia huicholes
Ixtln del Ro 1944
Ixtln del Ro
Chilapa
Nahuas de Guerrero,
Tonatico Chilapa 1947
ah
Chignautla Morelos 1967
Nhuatl Sierra Puebla
Zacapoaxtla Chignautla 1952
Nhuatl Sierra Puebla
Pepitilla Huaszamota Zacapoaxtla 1961
Huicholes, Tepehuan
Teotitln del Valle Mezquital 1966
Zapotecos
Balsas Guerrero, Teotitln del 1960
Presencia Nahua,
Morelos, Estado de Valle
ah
Mexico
Chapalote Siririjao El Fuerte Mayo
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 287
Conclusin
Los maces indgenas representan un patrimonio nacional invaluable, nico en
el mundo, que se encuentra en manos indgenas y campesinas. Las distintas
variedades de las razas se encuentran en todo el pas, por lo que Mxico
debe ser considerado pas de origen. Los territorios de los pueblos indgenas
albergan hoy en da gran parte de la agrobiodiversidad mesoamericana y los
productores deben ser reconocidos por el Estado mexicano como custodios
de ese tesoro invaluable. La situacin de los maces indgenas se ha com-
plejizado en tanto se introducen a las regiones de siembra original maces
mejorados, hbridos, o bien se combinan varias razas originales. Algunas
razas se van perdiendo o erosionando genticamente, a veces con el apoyo
de las polticas pblicas. Otras variedades se nativizan, en el sentido de que
los campesinos combinan maces mejorados con sus variantes indgenas.
Es imprescindible que el Estado mexicano declare a los maces indge-
nas (y en general la agrobiodiversidad mesoamericana) patrimonio cultural
de Mxico y acte en consecuencia para su defensa y conservacin y se
desarrolle una estrategia para evitar la extincin (inducida) de las razas
indgenas de maz.
Bibliografa
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Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 291
Poblacin
Nombre que se total indgena
Grado de Territorio
Pueblo indgena otorga cada pueblo (adentro y
Marginacin en hectareas
en su lengua afuera de los
territorios)
Macroetnia
Mayo Yoremes 102 709 Bajo 172 501
Tlapaneco - 114 325 Bajo 275 034
Tarahumara Raramuri 114 426 Medio 2 437 696
Mixe Ayuukjy 130 717 Medio 688 251
Chinanteco Tsa ju jm 191 710 Muy bajo 610 524
Purpecha Purhpecha 197 072 Alto 116 246
Huasteco Teenek 205 972 Muy bajo 277 701
Chol Winik 227 945 Alto 698 371
Mazateco Ha shuta enima 241 183 Alto 253 841
Mazahua Mazahua 270 100 Bajo 91 267
Totonaca Tutunaku 346 178 Muy bajo 291 015
Tseltal Winik a tel 346 392 Alto 821 584
Tsotsil Batsil Inc.otik 429 024 Alto 605 867
Otom Ha hu o hh 542 831 Bajo 406 726
Mixteco Nuu savi 663 864 Bajo 1 321 183
Zapoteco Benzaa o Binniz 730 465 Alto 1 350 875
Maya Maya 1 461 655 Bajo 6 928 393
Nahuas Macehuale 3 112 398 Muy bajo 1 878 477
Totales 10 110 417 24 163 779
Poblacin Indgena dentro
6 374 645
de territorios
Poblacin indgena fuera
3 735 772
de territorios
Captulo VII
Introduccin
En las ltimas dcadas se ha incrementado el reconocimiento hacia el
complejo de saberes ambientales que tienen las comunidades indgenas y
campesinas en todo el mundo. Este reconocimiento se da en el contexto de
varios procesos importantes de los que destacamos los dos siguientes: por
una parte, una mayor coincidencia entre la comunidad cientfica de que los
ecosistemas naturales en realidad constituyen sistemas bioculturales, esto es,
sistemas que han sido formados a travs de los siglos por dinmicas biolgicas
y humanas; y en segundo lugar, el fracaso o el limitado impacto de experiencias
conservacionistas que impulsan la creacin de medidas estrictas de control en
cuanto al aprovechamiento de los recursos naturales, que van desde vedas
hasta la prohibicin de acceso a zonas especficas.
El reconocimiento de que buena parte de la biodiversidad encontrada en
los ecosistemas naturales es en realidad producto de un manejo constante del
hombre (Posey, 1999; Carlson y Maffi, 2004), ha provocado que en muchas
organizaciones civiles y gubernamentales, as como en foros internacionales, se
hable cada vez ms de la necesidad de recuperar e incorporar el conocimiento
ecolgico tradicional de poblaciones indgenas y campesinas.
El vnculo entre el conocimiento tradicional local sobre recursos
naturales y la conservacin de la biodiversidad tiene respuesta incluso en
* Candidata a Doctora por la Universidad de East Anglia, Reino Unido. Investigadora
adjunta para la obtencin del grado de doctora Universidad de East Anglia.
** Doctor en Antropologa, Instituto de Investigaciones en Antropologa, FFyL, UNAM.
Centro Regional Universitario Centro-Occidente de la Universidad Autnoma
Chapingo.
300 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
1
Las cifras sobre hectreas de temporal y riego provienen del INEGI (2004).
2
Traduccin propia.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 303
3
El sistema de panteado consiste en la siembra alternada de hileras de maz y frijol.
304 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
Las conclusiones principales del trabajo apuntan hacia las ventajas y los
riesgos que tiene el aprovechamiento comercial de estas especies. En primer
lugar, la transicin de una economa de subsistencia a una de mercado lleva
a la especializacin en la produccin y consiguientemente a mayores ingresos.
Por otra parte, el incremento en la demanda de volmenes de productos
silvestres lleva en muchos casos a su sobreexplotacin.
En este sentido cobra importancia la flexibilidad y adaptacin de los
conocimientos tradicionales sobre estas especies no maderables del bosque
a nuevas circunstancias o retos como lo puede ser una mayor integracin al
mercado. El xito o fracaso de un aprovechamiento comercial de PFNM puede
depender en buena medida de la capacidad de adaptacin del conocimiento
tradicional a nuevas circunstancias.
En la siguiente seccin, sin pretender una revisin exhaustiva, presen-
taremos varios ejemplos sobre manejo tradicional de ecosistemas forestales,
incluyendo especialmente el manejo de PFNM. Cubrimos varias especies
de inters y distintos usos en los ecosistemas forestales ms importantes y
extensos de Mxico.
La divisin del territorio fue hecha por zonas, tomando como base las
reas de distribucin de los diferentes conjuntos de vegetacin del pas que
proponen Toledo et alt. (1985), como sigue:
a) zona clido-hmeda (que incluye selvas altas y medianas perennifolias
y sub-perennifolias),
b) zona clido-subhmeda (que incluye selvas bajas caducifolias, selvas
medianas y altas sub-caducifolias),
c) zona templado-hmeda (la integran los bosques de pino y encino),
d) zona templado-subhmeda (los bosques mesfilos de montaa) y
e) zonas ridas y semirida (incluye matorrales, pastizales y selvas espinosas).
Aunque se cuenta con importantes estudios sobre esta tcnica, los cuales
son concluyentes en lo que se refiere a su carcter racional como la forma
ms adecuada de manejo de la fertilidad del suelo en condiciones en las
que el mismo no puede retenerla por efecto del clima (Martnez, 1970) por
mucho tiempo se consider que constitua una de las razones principales de
degradacin y deforestacin de estos ecosistemas. Sin embargo, ltimamente
se ha demostrado que este manejo de la tierra es de los ms efectivos y
sustentables en un contexto de produccin agrcola en el trpico. Asimismo,
la roza, tumba y quema es parte de una estrategia de manejo intensivo de la
selva que incluye muchos usos de tierra, amplia manipulacin de especies y
control de procesos ecolgicos (Toledo et al., 2003).
Otras tcnicas de manejo de selva, como el uso de la regeneracin de
barbecho, de rboles en huertas familiares, sistemas agrosilvcolas y la reserva
de reas especiales de selva semimanejada, son tcnicas que forman parte del
conocimiento tradicional de comunidades rurales en zonas clido-hmedas.
Entre la gama de tcnicas tradicionales que utilizaron los mayas en
la pennsula de Yucatn estn los llamados campos elevados en las reas
inundables (sistemas similares a las chinampas del altiplano mexicano,)
as como los sistemas de terrazas y de manejo silvcola en las reas ms
escarpadas (Toledo et al., 1985). De acuerdo con Gmez-Pompa y Kaus
(1990), estas prcticas eran parte integral de sistemas de manejo de selvas
en el pasado:
Las selvas hmedas del sureste de Mxico no son ambientes intocados, sino
el resultado del ltimo ciclo de composicin de las selvas de hoy, donde
las civilizaciones Olmeca y Maya se desarrollaron por un periodo de por
lo menos 3 000 aos, alcanzando densidades de poblacin de 400 a 500
personas por km2 en reas rurales (Gmez-Pompa y Kaus, 1990:81).
5
Conforme al trabajo de Alderete y Ramrez (2005), el Gran Petn est constituido por
una regin ecolgica que abarca varios estados del sureste de la Repblica mexicana as
como reas de Guatemala y Belice.
312 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
para ver si el ltex blanco corre. En la base del rbol el chiclero coloca una bolsa
de lona con una capacidad de dos kilos y procede a picarlo en forma de V,
posteriormente, el rbol necesita de cinco a siete aos para cicatrizar y volver
a ser chicleado (Alderete y Ramrez, 2005:95).
Tambin en el rea maya de la pennsula de Yucatn, en selva mediana
subperennifolia, crece la palma de guano (Sabal spp.), especie importante
en la vida de los mayas de Quintana Roo, ya que proporcionaba alimento,
medicina, forraje y material para techar sus viviendas (Caballero, Pulido, et al.,
2005). El manejo de Sabal ha evolucionado a lo largo del tiempo y ha tenido
que ajustarse a una creciente demanda debido al turismo en la zona. Sin
embargo, como explica Caballero (2001) el manejo tradicional de la palma
no ha implicado la sustitucin de una estrategia por otra, sino ms bien su
acumulacin y su coexistencia dentro de un amplio rango de situaciones. Por
ejemplo, en algunas zonas con superficies importantes de bosque, las hojas de
Sabalyapa son recolectadas en los bosques y en la vegetacin antropognica.
En las regiones donde los bosques han sido casi totalmente eliminados,
la palma de guano (Sabal.mexicana) es manejada en varias formas: en la regin
ganadera del norte de Yucatn es promovida en potreros; en varios pueblos del
norte y oeste de Campeche se cultiva en pequeas plantaciones y en la mayor
parte de la pennsula la palma de guano es promovida en los huertos familiares,
cuyo manejo se ha vuelto intensivo, maximizando la disponibilidad de hoja
(Caballero, 2001).
Sin embargo, los hongos representan solamente uno de los recursos alimenticios
provenientes del bosque que son manejados de manera tradicional por
comunidades indgenas y campesinas en Mxico. El conocimiento y manejo
de otras plantas silvestres comestibles es de fundamental importancia en
muchas comunidades rurales. En la Sierra Tarahumara, por ejemplo, existen
alrededor de 1 900 especies de plantas, de las cuales 350 son consumidas
como alimento o medicina (LaRochelle, 2003). Las prcticas de colecta varan
de planta a planta, pero en todas se requiere un conocimiento detallado de
la especie. Por ejemplo, el hongo (Okawi sawarome) despus de llegar a su
tamao ideal sobrevive solamente cinco das y debe ser consumido fresco, de
tal manera que el recolector debe saber exactamente dnde y cundo hacer la
cosecha (LaRochelle, 2003:367).
Existen varias tcnicas de manejo de plantas silvestres que incluyen
prcticas de proteccin, promocin, dispersin de semillas, trasplante,
etctera. Sin embargo, solamente algunas de stas llevan a cambios en el
genotipo que comnmente se asocia con la domesticacin (Alcorn, 1981).
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 317
Zonas ridas
El 55% del territorio mexicano est cubierto por zonas ridas y semiridas,
correspondiendo 45% para los matorrales y 10% para los pastizales (Semarnat,
2002). En estos tipos de vegetacin existe una flora muy variada con ms de
2 200 especies pertenecientes por lo menos a 600 gneros y 122 familias
(Maldonado, 1985). Como en los dems ecosistemas, el hombre en el desierto
se empea en obtener el mximo provecho de la vegetacin natural en que
vive, aprovechando gran cantidad de especies vegetales silvestres que se han
utilizado tradicionalmente ya sea para la construccin, como combustible,
alimento, medicina, etctera.
La vegetacin en zonas ridas en Mxico y su uso por parte de las
diversas culturas prehispnicas en Mesoamrica han sido ampliamente
documentadas. Los arquelogos han revelado, por ejemplo, que las cactceas
columnares, junto con varias especies de Opuntia y biznagas, fueron algunos
de los principales recursos utilizados por los humanos en Mesoamrica (Casas,
2005). El conocimiento tradicional que tienen las poblaciones campesinas
sobre las especies de zonas ridas ms tiles y el manejo de las poblaciones
silvestres puede ser un elemento clave para su aprovechamiento comercial
sustentable.
Sin embargo, tambin existen varias especies cuyo manejo tradicional
se ha transformado en forma negativa, debido a su aprovechamiento
comercial; por ejemplo, el caso de la candelilla (Euphorbia antisyphillitica) y el
guayule, plantas que son extradas con todo y raz. El caso de la candelilla es
especialmente interesante, ya que de esta planta se extrae una cera que tiene
un sinnmero de aplicaciones que van desde la cosmtica hasta la electrnica.
La extraccin de candelilla se hace principalmente en poblaciones silvestres.
Para encontrar la planta, hoy en da los candelilleros recorren grandes
distancias y acampan varios das y hasta semanas. Al llegar a los sitios de
extraccin, los candelilleros arrancan manojos de tallos con todo y raz, y es
necesario esperar entre dos y cinco aos para que sta se recupere y crezcan
nuevos tallos. Esta forma de aprovechamiento es depredadora y es provocada
porque las empresas compradoras del producto lo adquieren en condiciones
de monopolio, a precios bajos, por lo que es determinante la velocidad de
cosecha y el peso de la misma, mucho menores ambos si se corta a machete o
tijera y se deja la planta con raz para la mejor regeneracin.
El manejo de la cubierta vegetal en zonas ridas ha sido en su mayor parte
de tipo tradicional, mismo que an hoy en da se est practicando en muchas
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 319
Conclusiones
a) Contra lo que parece a primera vista, el conocimiento tradicional,
cuando se mira fuera del marco restringido de la produccin madera-
ble industrial, es de una riqueza enorme y de una significacin econ-
mica, cultural y social digna de mayor atencin que la que actualmente
recibe.
b) Hablar de conocimiento tradicional es reconcer la multifuncionalidad de
la silvicultura, bajo los mismos criterios del debate sobre la funcionalidad
de las agriculturas. De hecho, no es concebible la existencia de
conocimiento forestal sin un conocimiento campesino integral, que
corresponde al carcter crecientemente diverso de las actividades del
campo mexicano.
c) Sin duda, los pueblos indgenas, que han hecho de la conservacin
de sus tradiciones y culturas un instrumento estratgico de identidad,
cohesin y supervivencia, son los especialistas ms destacados en
el tema. Sin embargo, es indispensable reconocer, por un lado, la
amplitud de la generacin, transmisin y aplicacin de los saberes
320 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
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324 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
Captulo VIII
valoracin de la biodiversidad
y el Conocimiento tradicional
Un recuento pblico o privado?
Yolanda Cristina Massieu* y Francisco Chapela Mendoza**
1
Para el autor citado, la ingeniera gentica, en comparacin con otras tecnologas re-
cientes, como la informtica, la electrnica y todas las tecnologas relacionadas con la
energa, ha sido un fracaso manifiesto, dado el nmero y el valor real de las innovacio-
nes. Ello se expresa en que, a la fecha, despus de dcadas de investigacin y cuantiosas
inversiones, slo haya dos transformaciones comerciales en agricultura: las resistencias
a herbicidas y a insectos.
2
Un ejemplo al respecto sera la reciente transformacin gentica del maz para producir
plsticos y frmacos
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 331
3
Aqu hay un valor del carbono almacenado (en trminos de daos evitados) que puede
ser de cinco o 10 dlares por tonelada. Si se consideran bosques primarios y secunda-
rios que pueden contener 200 y 300 toneladas de carbono por hectrea, los montos
pueden ser importantes (Dixon,1986:125).
332 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
por la FAO. Las contribuciones al fondo son voluntarias para los pases
participantes, as que ni el fondo internacional ni los derechos del agricultor
se han materializado.
En aos recientes, el conflicto sobre los RGV ha sido muy influenciado por
otros dos acuerdos internacionales: 1. el Convenio sobre Diversidad Biolgica
(CDB) adoptado durante la Conferencia de Naciones Unidas sobre Ambiente y
Desarrollo en Ro de Janeiro en 1992; y 2. el Acuerdo sobre Aspectos Comerciales
Relacionados a los Derechos de Propiedad Intelectual (TRIPS), que es parte del
nuevo Acuerdo General de Aranceles y Comercio de la Organizacin Mundial
de Comercio (OMC), concluido en Marruecos en 1994.
El Convenio sobre Diversidad Biolgica fue resultado de un proceso
internacional de negociacin que se origin en la preocupacin ambiental
pblica en los pases de la OCDE. Ms que enfocarse en plantas tiles para
la agricultura, como el compromiso de la FAO, el convenio se dirige a la
preservacin de todas las plantas y organismos que sostienen el ecosistema
global. Los objetivos del Convenio sobre Diversidad Biolgica son: 1)
conservar la diversidad biolgica, 2) promover el uso sustentable de sus
componentes y 3) lograr una distribucin justa y equitativa de los beneficios
provenientes de la utilizacin de los recursos genticos (Monagle, 2001:3).
El convenio elimin el estatus de herencia comn de la humanidad, para las
plantas silvestres y variedades locales; se acepta en su lugar que los pases
de origen tienen derechos de soberana sobre todo el material biolgico
originado en su territorio.
El otro argumento, el de los TRIPS, de la OMC fue resultado de una
iniciativa de las principales organizaciones industriales del mundo para
proteger la nueva tecnologa, las medicinas y los trabajos audiovisuales contra
la imitacin. Las grandes compaas qumicas y farmacuticas que se han
involucrado en la ingeniera gentica pronto descubrieron que la proteccin
legal mundial de sus innovaciones biotecnolgicas se haba vuelto esencial.
Un grupo de pases atrasados se opuso y pidi la exclusin de patentabilidad
para las variedades de plantas y animales, as como otros productos y
procesos, si se consideraban de inters pblico. El acuerdo TRIPS incluye
una serie de formas de derechos de propiedad intelectual con implicaciones
para la conservacin de la biodiversidad, incluyendo patentes y sistemas sui
generis (como el mencionado derecho de obtentor vegetal). En lo referente a
patentes, los miembros pueden excluir invenciones si lo consideran necesario
para proteger la vida humana, animal o vegetal o para evitar daos serios
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 335
4
Financiado por USAID, CARE USA y donantes privados.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 341
7
Actualmente 10 corporaciones controlan 32% del mercado de semillas comerciales y
100% del de semillas genticamente modificadas. Slo cinco corporaciones controlan
el comercio mundial de granos, Cargill es la ms grande y compr Continental, la
segunda ms grande. Monolitos como Cargill y Monsanto participaron activamente
en dar forma a los acuerdos de propiedad intelectual, en particular el Acuerdo de la
Ronda de Uruguay, que llev al establecimiento de la OMC.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 343
8
(c) A wilderness, in contrast with those areas where man and his own works dominate
the landscape, is hereby recognized as an area where the earth and its community of
life are untrammeled by man, where man himself is a visitor who does not remain. An
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 347
Los conceptos de que i) hay que segregar reas para su preservacin; ii) y
que esto es un asunto pblico que debe ser administrado por el gobierno
federal, e incluso el absurdo de que la mujer no produce impacto ambiental,
slo el hombre, se calcan cuidadosamente de la ley estadounidense. Esto
conlleva una serie de contradicciones y problemas de tipo social crecientes
en los apenas 18 aos de vida de la LGEEPA.
El primer problema es que en Estados Unidos no tienen la densidad
de poblacin de Mxico, ni la intensidad de manejo mediante tcnicas tra-
dicionales de su vecino del sur y no han realizado una reforma agraria como
resultado de una Revolucin. Las formas colectivas de propiedad, como son
el ejido y la comunidad agraria en Mxico, no existen en la legislacin de
Estados Unidos. No es obvio, por lo tanto, que en el caso de Mxico por
razones de tipo cientfico, educativo, escnico, o histrico las tierras de
propiedad privada o colectiva deban pasar al dominio del gobierno federal.
El segundo problema es que las reas de mayor diversidad biolgica
de Mxico no pueden cumplir el requisito que establece la ley de que no
hacia principios del siglo XX. El paisaje que antes era diverso, se simplifi-
c al cubrirse de caaverales y pastizales. Hacia mediados del siglo XX, la
actividad caera iba en decadencia. Se introdujo el caf como alternativa
productivo-econmica. Se fue reconstruyendo la economa regional, ya no
sobre la base de las grandes haciendas de caa, sino sobre la base de pequeas
plantaciones de caf de sombra. La gente de la regin empez a llevar plantas
tiles para asociarlas con el caf o para formar la sombra que requiere este
cultivo. De esta manera, se reconstituy la cubierta vegetal, se restablecieron
poblaciones de fauna y se constituyeron verdaderos jardines de muy alta
diversidad. Los trabajos recientes de Patricia Moguel y Vctor Toledo en esta
zona sugieren que la diversidad biolgica de estos Jardines Forestales est
asociada al grado de conocimientos que tiene el jefe o la jefa de la unidad
productiva sobre usos de las plantas. El conocimiento tradicional es la base
para que se restablezca y cultive la diversidad biolgica en esta zona. De
manera inversa, un colonizador que llegara a una tierra extraa para l, no
sabra qu especies inducir, introducir o conservar y qu especies suprimir.
Muy probablemente optara por introducir y fomentar unas pocas especies
que conociera, en detrimento de otras. En el caso de los jardines forestales
que se han creado en la Sierra Norte de Puebla, es evidente el papel que ha
desempeado el Conocimiento Tradicional en la restauracin de la cubierta
forestal, de las funciones ecolgicas de la vegetacin de estratos mltiples y
en el restablecimiento de una gran diversidad biolgica.
El concepto de wilderness, que es el que protege y fomenta la LGEEPA,
no tiene nada que ver con el proceso de cultivo que realizan las comunidades
indgenas de la Sierra Norte de Puebla. No hay una poltica de Estado para
vitalizar el conocimiento y las formas de cultivo tradicionales.
Pero la Sierra Norte de Puebla no es una excepcin ni un caso nico.
As como los nahuas restauran, cultivan y manejan el bosque mesfilo, una
serie de estudios de caso en distintos pases revela que existe una diversidad
de prcticas locales o tradicionales de manejo de los ecosistemas. Entre estas
prcticas se encuentra el manejo de especies mltiples (como es el caso de
los sistemas rsticos de caf de sombra), la rotacin de recursos (como es el
caso de los sistemas de ao y vez, usados en la meseta purhpecha), el manejo
de la sucesin (como es el caso de los sistemas de roza en ciclos anidados
que usan los chinantecos), el manejo de paisajes en parches (como son los
sistemas silvcolas de las comunidades de la Unin Zapoteco Chinanteca de
Oaxaca), entre otros. Estos estudios muestran que los mecanismos sociales
350 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
que estn detrs de estas prcticas tradicionales incluyen una serie de adap-
taciones para la generacin, acumulacin, y transmisin de conocimientos, el
uso de instituciones locales para establecer liderazgos y formas de resguardo
de los recursos, reglas definidas de acceso, uso y distribucin de los recur-
sos, mecanismos de apropiacin cultural de las prcticas tradicionales y el
desarrollo de cosmovisiones y valores culturales adecuados a los sistemas de
manejo (Berkes et al., 1999).
Esto tiene muy poco que ver con la idea que se practica en las reas
naturales protegidas, en las que el gobierno federal nombra a un director
del rea, el cual se encarga de ejecutar un plan de manejo elaborado con
criterios muy distintos a los que se consideran en los sistemas tradicionales
de manejo.
Aunque no existe una poltica de apoyo a estos procesos, algunas or-
ganizaciones de la sociedad civil se han dado a la tarea de sistematizar los
procesos comunitarios descritos arriba, para disear o mejorar sistemas co-
munitarios de manejo de los recursos naturales y biolgicos, como es el caso
del esquema de planeacin comunitaria del manejo del territorio (PMTC)
(Chapela y Lara, 1996). Este esquema ha permitido que comunidades ind-
genas ordenen 212 500 ha en Oaxaca, de las cuales 53 700 estn destinadas
a la conservacin. Comparadas con la superficie oficialmente decretada para
la proteccin ecolgica en el estado, las reas ordenadas equivalen al 58%
de las reas protegidas oficialmente. De esta manera, la PMTC se configura
como una opcin alternativa para el cuidado de la biodiversidad, con la
participacin plena de los propietarios de la tierra y cumpliendo al mismo
tiempo con objetivos de desarrollo social (Lara y Chapela, 2005).
9
De acuerdo con el Convenio de la Diversidad Biolgica, por recursos biolgicos se en-
tienden los recursos genticos, los organismos o partes de ellos, las poblaciones o cual-
quier otro tipo del componente bitico de los ecosistemas de valor o utilidad real o
potencial para la humanidad.
352 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
10
Para una descripcin formal de la metodologa de la evaluacin rural participativa
vase Lara et al. (2005).
354 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
Turismo alternativo
Produccin forestal
Oferta regional de
Marca colectiva
certificadas
de fauna
no maderable
de flora
Perspectivas
microrregionales del
COINBIO en Guerrero
UMA
UMA
ACP
servicios ambientales
Turismo alternativo
Produccin forestal
Oferta regional de
Marca colectiva
certificadas
de fauna
no maderable
de flora
Perspectivas
microrregionales del
COINBIO en Guerrero
UMA
UMA
ACP
Zona Norte
Ejidos: Atzala, Cacalotenango,
Corre-
Taxco, San Pedro, San Felipe Hidrol
dor
Chichila.
Ejidos: Copalillo, Zicapa,
Medi- Vena-
Mezquitlan, San Francisco
cinales do
Oztutla.
Regin Centro
Ejidos: Santa Brbara, San
Miguel, Santa Rosa, San Hidrol
Cristbal.
Ejidos: Santiago Tlacotepec, Regio-
Pueblo Viejo, El Tambor nal
Ejidos: Xochipala, Zumpango,
Huiziltepec, Xocomanatln, Vena- Regio-
Agua del Panten Corral de do nal
piedra, Yextla, Carrizal.
El COINBIO est generando una base emprica para el diseo de una poltica
en materia de diversidad biolgica y recursos biolgicos, que ms que
responder a las orientaciones y definiciones de la Wilderness Act de Estados
Unidos propicie el fortalecimiento y desarrollo de los sistemas comunitarios
de manejo adaptativo, que han sido los que permitieron a las comunidades
rurales sobrevivir y desarrollarse en el pasado y son los que pueden permitir
un verdadero desarrollo comunitario en estos tiempos de nueva ruralidad. El
diseo de dicha poltica podra beneficiarse de las lecciones que est generando
el COINBIO. Por ahora, hay siete lecciones aprendidas (Toledo, 2006):
1. Es posible que las comunidades y ejidos establezcan reas protegidas con
altos niveles de gestin. Antes de la intervencin del COINBIO apenas 8%
de las comunidades participantes tena reas de conservacin acordadas
formalmente, y despus de la intervencin del proyecto 43% de las
comunidades acordaron destinar parte de sus territorios a la conservacin
con lo que el porcentaje de comunidades con zonas de conservacin
se increment a 51%. Se est avanzando en el reconocimiento y la
certificacin oficial de estas reas comunales protegidas.
2. Es posible que las comunidades y ejidos desarrollen sistemas sostenibles
de manejo. Las comunidades que tenan superficies bajo manejo
sustentable con algn tipo de certificacin o autorizacin (permiso
de aprovechamiento forestal, UMA, produccin orgnica y servicios
ambientales) representaban 40% del total antes de la intervencin del
COINBIO. Despus de la intervencin del proyecto este porcentaje se
increment en 12 puntos para alcanzar 52% del total.
3. La inversin en participacin vale la pena. El diseo participativo y auto-
gestivo permiti un alto grado de apropiacin de los ejidos y comunidades
participantes en el COINBIO. Cuando no se resolvi de manera adecuada
la relacin entre el carcter participativo y autogestivo del proyecto y los
mecanismos operativos, se crearon conflictos que pusieron en riesgo al
proyecto. Sin embargo, fue posible superar este problema y recuperar
el tiempo perdido mediante el esquema de consultas, el taller realizado
a principios de 2004 y los ajustes a las reglas bsicas del proyecto,
incluyendo el respeto al papel fiduciario de Nafin y al papel de gestin
y de desarrollo de polticas de los comits. Esto se refleja en la alta
calificacin de 8.6 en escala de 10 que los ncleos agrarios e instituciones
participantes otorgan al proyecto.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 357
11
Puede verse una descripcin del mtodo de la evaluacin rural participativa adaptado
a las condiciones de Mxico en Lara, Velasco y Diez de Sollano (1996).
358 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
Conclusiones
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Recursos genticos y conocimiento tradicional indgena: la regulacin
362 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
Introduccin
El estado de Chiapas se caracteriza por su enorme riqueza cultural y de
recursos naturales. Esta rica tradicin cultural y humana se basa en que
Chiapas tiene una importante presencia de grupos indgenas, la mayora
de ellos de origen mayense, entre los que sobresalen los tsotsiles, tseltales,
tojolabales, choles y lacandones.
En la historia Chiapas, sus pueblos y comunidades indgenas han desem-
peado un papel muy importante desde diversas perspectivas. Adems de
las resistencias al proceso de colonizacin de sus territorios, han ofrecido al
mundo muchos de sus conocimientos sobre salud-enfermedad, la relacin
con la naturaleza y la bsqueda de alternativas a la produccin y sus enfer-
medades y plagas.
2
Esa megadiversidad es en s una disputa; en ese marco, Mxico junto a otros pases
tuvo la iniciativa de formar un espacio de discusin en el mbito mundial, conforman-
do el bloque de pases megadiversos en el ao 2002.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 367
De qu estamos hablando?
Segn algunas cifras agrarias, para 1990 el nmero de ejidos y comunidades
en Chiapas fue de 2 072 con una superficie total de 4 066 098 hectreas. El
nmero de ejidatarios y comuneros ascendi a 248 531, correspondiendo a
cada uno de ellos una dotacin promedio de 16.4 hectreas. De la superficie
total, 41.6% correspondi a superficie de labor, 25.3% a pastos y 31.1% a
bosques y selvas. El principal problema de los ejidos y comunidades sigue
siendo la carencia de servicios bsicos que para ese ao se reflej en los si-
guientes rubros: ms del 80% no contaba con energa elctrica, 60% careca
de agua potable entubada y slo 40% tena carretera pavimentada.
Segn el XII Censo de Poblacin y Vivienda del ao 2000, la pobla-
cin chiapaneca ascendi a 3 920 515. As, tenemos que la tasa bruta de
mortalidad es de 4.13, la de mortalidad infantil de 31.18, y la tasa global
de fecundidad de 3. Los nios se mueren principalmente por deficiencias
nutricionales, infecciones intestinales, neumona e influenza, anomalas
congnitas y afecciones perinatales, lo que representa una tasa de 29.6 por
mil nacidos vivos. En cuanto a la mortalidad materna, la tasa en Chiapas
es de 6.3 casos por 10 mil habitantes (Conapo, 2000).
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 369
del conocimiento tradicional radica en que est basado en una prctica mi-
lenaria, de lo que se llamara ensayo-error; es decir, de una experimentacin
subjetiva que va marcando con el tiempo lo que puede ser una respuesta a
lo que afecta ese equilibrio, que de forma social influye en el equilibrio en
los mbitos comunitario, familiar y personal.
Desde esta perspectiva vale la pena preguntarse: qu debemos hacer
para que los recursos naturales y el llamado conocimiento tradicional resulte
en beneficio de los pueblos y comunidades indgenas? Los recursos naturales
y el conocimiento tradicional existen desde hace muchos aos, pero sus
beneficios han sido marginales?
Esas preguntas son parte del debate, sin embargo debe reconocerse
que la visin de que hay un inters por expropiar el conocimiento tradi-
cional y tambin los recursos propios a las comunidades es una verdad a
medias. El conocimiento se produce por una lucha constante para que la
salud-enfermedad no altere el equilibrio visto por la comunidad o el grupo
social respectivo. La herbolaria se desarrolla con base en la flora medicinal
que abunda y, por lo tanto, su uso no es propio de una sola regin. Otro
elemento es que su uso ha sido demostrado de generacin en generacin.
As, para tratar la diarrea en una comunidad de la regin fronteriza se usa
el epazote, como se usa en la ciudad de San Cristbal de las Casas. Un
mdico tradicional lo explica de la siguiente manera:
Mi conocimiento me fue dado por un sueo. As so tambin mi pap.
Aprend a rezar y vi, como mi pap, que el rezo y la planta eran buenas.
Su dolor y su abultazn, calmaron. Cuando tom la hierba, su corazn
estuvo tranquilo, por eso no slo es darle la planta, tambin es bueno
rezarle a Dios, si Dios da fuerza, entonces Dios quiere que la persona se
cure (entrevista a mdico tradicional o ilol, Maravilla Tenejapa, Chiapas,
26 de enero, 2006).
Entre los tsotsiles y los tseltales, se cree que las principales enfermedades
son el komel (susto), il kop (los malos deseos), chulelal (enfermedad
del alma), bkta chulelal (la gran enfermedad del alma), chonbil chulelal
(enfermedad del alma causada por su venta).
Precisamente a partir de esta relacin salud-enfermedad es que en la
relacin hombre-naturaleza la cosmovisin indgena le da un peso importante
a la naturaleza. Son importantes las plantas, las piedras y el bosque:
Los mdicos que tienen ttulo no entienden lo que pasamos nosotros como
enfermedad. La envidia nos enferma, si alguien nos mira con enojo, tambin
nos enfermamos. Padecemos mucho de la alteracin. El mdico slo nos
da medicinas. S nos curan a veces, pero no rezan. No saben que si Dios
quiere que nos curemos, nos vamos a curar. Si Dios no quiere, ah noms
vamos a morir, as Dios lo quiso. (Entrevista a ilol o mdico tradicional,
Poza Rica, municipio de Las Margaritas, Chiapas, 25 de enero, 2006).
El ICBG Maya
Entre el conocimiento tradicional y la biodiversidad
El ICBG Maya se constituy con un grupo de cientficos de diversas institu-
ciones de investigacin dedicados al estudio de las plantas y el conocimiento
sobre el poder curativo en la regin conocida como Altos de Chiapas. El
propsito principal fue la bsqueda de mejores formas de conservar tanto las
plantas como el conocimiento tradicional que sobre ellas tienen las comu-
nidades, as como promover su uso sustentable en formas que reconocieran
y respetaran los derechos de las comunidades.
376 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
(Contina...)
378 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
(Contina...)
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 379
estn muy interesadas precisamente en los principios activos que es probable es-
tn en la naturaleza, digamos, esperando a que una vez que se descubran, lo
cual tambin hay que reconocer. Es una posibilidad que la informacin de la
bioprospeccin pueda ser el punto de partida para la obtencin de ganancias
por parte de las empresas, o incluso por quienes se dedican a estos temas. No
podemos obviar que la bioprospeccin tambin puede figurar como la punta
de lanza para patentar los conocimientos milenarios de las comunidades y,
de esa manera, recibir las millonarias carretadas de dinero.
Ms all de esto, su postura y su forma de apropiarse de recursos que
no son de ellos, sino en todo caso son patrimonio de la humanidad, y que
sin ms se patentan, ya no en beneficio de la humanidad, sino en beneficio
particular, apropindose de manera ilegtima de un bien que es ms que una
mercanca, algo que nunca entender el capital trasnacional.
La experiencia del ICBG Maya puso en entredicho una forma de hacer
investigacin, fue una leccin que provoc un debate interno en ECOSUR y
replante la relacin entre la academia y los pueblos indgenas.
Un error sustantivo de parte del Proyecto ICBG Maya, es el desconoci-
miento de los actores sociales de la regin, adems de las ONG (tambin llamadas
organizaciones civiles o de la sociedad civil) y de las organizaciones sociales,
como es el caso de la Asociacin de Inters Colectivo (ARIC) Independiente y
Democrtica, que ha venido luchando en contra del desalojo en la Reserva de
Montes Azules. Adems, justo en los aos de 1999-2000, un aspecto central
fue el reconocimiento de los derechos indgenas, que como resultado de las
negociaciones de San Andrs, entre el EZLN y el gobierno federal, postul la
ley de Derechos Indgenas, que la Cocopa propuso para llevar como propuesta
de Ley al Congreso de la Unin.
Tampoco est fuera de este anlisis la enorme militarizacin en el estado
de Chiapas y la polarizacin, que en su extremo ms dramtico ha sido la
paramilitarizacin. Si la perspectiva del anlisis es de que hay una intencin
de apropiarse de los recursos genticos, la militarizacin se explica por ese
inters: enfrentar a la insurgencia es slo una parte; proteger los intereses de
las multinacionales es lo primordial.
El ICBG Maya no podra haberse visto de otra manera en este contexto
y el no haber visualizado la riqueza de estos actores sociales. Es cierto que se
fueron radicalizando, pero a todo ello se agreg el hecho de que la Semarnat
(en el periodo de Zedillo, 1994-2000) se ubic como mediadora, cuando en
realidad, por aquello de la normatividad, era parte del problema. De hecho
382 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
4
En 2005, el gobierno de Pablo Salazar propuso el Anteproyecto Legal de los Cono-
cimientos Tradicionales de los Pueblos y Comunidades Indgenas, como adicin al
Ttulo cuarto bis a la Ley de Propiedad Industrial en donde seala: El Estado es
nico titular de los derechos sobre biodiversidad y portante nico que podr permitir
y controlar el acceso a los mismos por parte de terceros. No obstante los derechos de
propiedad intelectual sobre biodiversidad, por ejemplo la herbolaria, son distintos, ya
que en ellos se incorpora un elemento o aportacin humana: el conocimiento. Esta
propuesta slo qued en eso.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 383
Mapeando
Las organizaciones luchan por su reconocimiento
Hoy el mundo de las organizaciones de mdicos y parteras indgenas es amplio,
y no slo luchan por mejores condiciones de salud y por el reconocimiento
de su prctica, sino tambin por su cultura y su reconocimiento. La Omiech
es una de las organizaciones que desde 1985 han luchado por todo ello. En
1994, con apoyo del INI, se conform en el mbito estatal el Consejo de
Organizaciones de Mdicos y Parteras Indgenas Tradicionales de Chiapas
(Compitch). En dicho consejo se agruparon incipientes organizaciones
de las regiones predominantemente indgenas, que mediante los Centros
Coordinadores Indigenistas (CCI) del INI promovieron que se organizaran por
etnia y por prctica a los terapeutas tradicionales. Es a partir de 1999, ante la
negativa en torno al proyecto conocido como ICBG Maya,5 que el Compitch
adquiere una mayor presencia en Chiapas.
Su lucha fue contra la biopiratera, pero tambin contra la apropiacin
ilegal de los recursos genticos que la bioprospeccin ha hecho de forma ilegtima.
Sin embargo, hay que considerar que el Compitch logr, primero mediante
la moratoria y luego con la cancelacin definitiva, un triunfo importante
que motiv a que la gente ampliara sus demandas a el reconocimiento de los
Acuerdos de San Andrs y de una legalidad basada en la consulta directa y en
el consentimiento previo e informado6 para poder conocer, antes que nada, de
toda intencin en cuanto al manejo de los recursos genticos. Actualmente se
encuentran adscritas las siguientes organizaciones:
5
Vase la tesis de Lauren Naville, The Experts, the Heroes, and Indigenous People. The Sto-
ry of the ICBG Maya Bioprospecting Project in Chiapas, Mxico, 2004, Noragric/NLH.
6
El Convenio 169 de la OIT, si bien es un marco legal reconocido por Mxico desde
1991, la reivindicacin de las organizaciones sociales es ms bien por la llamada Ley
Cocopa, que surge despus de la firma de los Acuerdos de San Andrs, y que finalmen-
te en 2001, el Congreso mexicano, aprob otra ley distinta que mantiene el conflicto
entre el EZLN y el gobierno federal.
384 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
Como han sido crticos del gobierno de Chiapas, y a pesar de ser invitados
a participar en diversos Consejos de Medicina Tradicional, el Compitch ha
pintado su raya de toda relacin con instituciones gubernamentales, por lo que
la Secretara de Pueblos Indios (Sepi) ha llevado, desde 2002, un Programa
de Medicina Indgena de donde surgi, a principios del 2006, el Consejo
Estatal de Organizaciones Interculturales de la Salud en la Medicina Indgena
de Chiapas (Coismich). No es una respuesta o una oposicin al Compitch,
pero se trata de contar con un referente que ahora es casi imposible que lo
sea el Compitch, dado que como grupo antisistmico tiene una orientacin
que va ms all de una simple relacin y s la confrontacin en toda iniciativa
que no conlleve la consulta y la participacin de sus integrantes.
El inicio de estas organizaciones es interesante: han luchado por su re-
conocimiento como practicantes de una medicina que ha sido menospreciada
por el llamado rigor cientfico, adems, como resultado de su lucha jurdica,
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 385
municipales, donde venden sus servicios, pero la mayora ejerce en sus co-
munidades, parajes o rancheras.
Su agrupacin se organiz en torno a la defensa de su cultura, por lo
que la medicina y el conocimiento tradicional son vistos fundamentalmente
como un problema cultural. Hoy, cada vez ms, el conocimiento tradicional
tiene gran inters de parte de organismos multilaterales, de empresas tras-
nacionales y de movimientos sociales (no slo el de las organizaciones de
terapeutas, tambin organizaciones civiles, indgenas y campesinas que unen
sus luchas contra el saqueo de los recursos naturales, todas ellas agrupadas
en redes de tipo trasnacional y que hoy en da han favorecido al desarrollo
del Conocimiento Tradicional, desde una perspectiva que rebasa la demanda
cultural).
Concluyendo?
Los pueblos y las comunidades tienen claro que el manejo de sus recursos
est ntimamente ligado a sus conocimientos. Por ello, no es de extraar el
surgimiento de proyectos y programas para fortalecer a la medicina indgena
y el que los mdicos se organicen para fomentar el rescate y fortalecimiento de
su cultura, en este sentido se ubica la Omiech y ahora el Compitch. Chiapas
es un referente lleno de imgenes y frases; de ello da cuenta el investigador
Viqueira:
[...] la afirmacin de que Chiapas es un estado rico dista mucho de ser
evidente. Sorprende que antiguos marxistas consideren que hoy en da la
produccin de caf, maz, ganado, la extraccin de gas natural y la generacin
de energa elctrica en presas basten para garantizar la prosperidad de una
abundante poblacin en rpido crecimiento demogrfico.
[...] Pero aun suponiendo que los recursos naturales mencionados anterior-
mente fuesen suficientes para hacer de Chiapas un estado rico, el hecho
es que todos ellos se encuentran fuera de las regiones indgenas, y ms
especficamente fuera de la zona de conflicto que comprende las Montaas
Mayas y la Selva Lacandona (Viqueira, 2002:78-79).
Chiapas es visto como una imagen. Los pueblos indgenas son actores
histricos desde hace un buen tiempo: el V Centenario, la irrupcin zapatista
de 1994, la puesta en prctica del Convenio 169, los Acuerdos de San Andrs
y la ley indgena que reconoce su autonoma. Pero tambin es la historia del
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 387
Han pasado muchos aos de esta declaracin, pero refleja varios de los puntos
que hoy en da se viven en relacin con el conocimiento tradicional y su
prctica en la salud. Para empezar, no es un problema de una prctica aislada
de otras prcticas, sino que refleja una visin de colaboracin para intentar dar
respuestas a los problemas de salud. El conocimiento tambin es visto como
algo que se posee, y en este sentido debe compartirse y dar el servicio para, as,
obtener respuestas.
El desarrollo del mismo est vinculado a una visin de futuro, y ah
radica la disputa, en el sentido de que hoy en da la disyuntiva de la vida es
asegurar el futuro de los recursos como el agua, el aire y los recursos genticos.
Las organizaciones sociales le disputan a la globalizacin el sentido de la vida,
como un derecho y un bien de la humanidad. Como dice Chapela:
[...] Tienen una gran riqueza [Chiapas, Oaxaca, Veracruz], por ser las de ms
alta diversidad y porque el talento creativo de su gente es enorme. En el siglo
XX se enfatizaba el entrenamiento para el trabajo, porque haba que formar
obreros, administradores y gerentes que operaran los grandes sistemas de
produccin en masa.
Mxico puede optar por dejar de ser un productor de materias primas y
convertirse en un lder biotecnolgico [...] por ello:
Hay que desarrollar sistemas justos y transparentes de proteccin de
los derechos de proteccin intelectual, incluyendo los conocimientos
tradicionales y colectivos, as como las innovaciones de los creadores
nacionales (Chapela, 2005:108).
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 389
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Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 391
Captulo X
El Conocimiento Popular,
campesino e indgena desde abajo
El caso Puebla
Ricardo Prez Avils*, Sonia Emilia Silva Gmez** y Silvestre Toxtle Tlamani***
Introduccin
En la sociedad actual un mbito perfectamente definido y claramente cons-
tituido es el de la cultura, la ciencia y el de la actividad cientfico-tecnolgica,
con actores determinados por reglas claras de juego, donde el capital disputa-
do es el conocimiento con su carga de poder simblico y econmico.
* Doctor en Sociologa, UNAM. Profesor-investigador DUDESU-ICUAP, BUAP.
** Doctora en Estrategias para el Desarrollo Agrcola Regional, Colegio de Postgraduados.
Profesora-investigadora DUDESU-ICUAP, BUAP.
***Maestro en Ciencias en Estrategias para el Desarrollo Agrcola regional, Colegio de
Postgraduados, Mxico. Profesor-investigador Escuela de Biologa, BUAP.
Estudiantes colaboradores: sociologa: Elizabeth Cario Ibarra, Elosa Bauza Spezia y
Yolanda Morales Martnez; ingeniera ambiental: Luis Enrique Arriaga Estrada; y an-
tropologa: Omar Cecilio Hernndez y scar C. Hernndez Hernndez. Adems, el
antroplogo Adelaido Amaro Aranda y la filsofa Socorro Flores.
392 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
1
Antonio Macas (2005), entrevista.
394 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
Entonces, lo que desaparece son las formas de vida y de cultura y cmo ha-
ban interactuado naturalmente con la biodiversidad (Ribeiro, 2001:55).
La identidad cultural de los grupos humanos en nuestro pas est liga-
da a muchos de los recursos naturales, de ah la importancia de recuperar
y mantener el conocimiento popular en cualquiera de sus expresiones en
gente que ha mantenido la naturaleza a su manera, mediante sus acciones
cotidianas.
Este planteamiento y concepcin del conocimiento popular campesino
e indgena, requiere la solucin de dos tareas bsicas, que se convierten en
problemas de investigacin:
1. El conocimiento de las reglas que se han inventado desde el poder para des-
conocer y descalificar el conocimiento tradicional, a la vez que realizar su
robo, expropiacin y privatizacin por parte de las grandes trasnacionales.
2
La biopiratera es la captura, el patentamiento y la monopolizacin de estos saberes
(Toledo, 2001:41).
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 397
Segn las bases de la matriz del conocimiento, de sus reas y de las prcticas
generadas para el manejo de la naturaleza, se puede vislumbrar un conoci-
miento universal de la vida toda que es inagotable. Sobre su comprensin en
Puebla se realiza el siguiente esfuerzo.
Total estatal 5 076 686 957 650 18.9 416 968 102 423 8 259 11 892 8 225 14 499 264
Total seleccionado 3 784 563 926 170 409 930 101 766 4 166 8 367 2 994 13 376 2
% Relacin estatal 74.54 96.71 93.81 98.68 50.44 70.35 36.40 92.25 0.75
Fuente: INI-Conapo, Estimaciones de la poblacin indgena a partir de la base de datos
de INEGI, XII Censo General de Poblacin y Vivienda, 2000.
estos municipios se encuentra casi el total de los tres grupos tnicos ms nu-
merosos en Puebla, o sea, 93.81% de la poblacin nhuatl, 98.68% de los
totonacos y 92.25% de los popolocas. Con excepcin de los ahs, que se
encuentran poco ms de un tercio aunque son el grupo de menor pobla-
cin, tambin se registran en dichos municipios 70.35% de los mazatecos
y el 50.44% de los mixtecos.
Puebla, segn el VII Censo Agrcola-ganadero (INEGI, 1994), ocup el
primer lugar nacional en cuanto al nmero de unidades de produccin rural
(UPR) en el pas, ya que contaba con 460 689 que representaban 10.7% del
total nacional, que era de 4 407 880 unidades. Pero de este total slo 333 296
(8.7% del nacional) tenan actividad agropecuaria. Por la superficie, estas uni-
dades con actividad agropecuaria o forestal contaban con 1 489 746 ha, lo
que da una idea de la superficie promedio de las UPR, apenas mayores a tres
hectreas.
De las UPR en Puebla, 398 301 son menores de cinco hectreas (ejidales,
privadas y mixtas), representando 84.80%, lo que indicara que ms de tres
cuartas partes de los productores rurales son campesinos. No pasa lo mismo
con la superficie, pues slo poseen 688 751 ha de las 2 233 866 de la entidad,
lo que apenas representa 30.83 por ciento.
La distribucin de la poblacin campesina en todo el estado es ms o
menos uniforme, pero nuevamente destacan los municipios de la Sierra Norte
(Cuetzalan con 8 089; Tetela de Ocampo con 6 374; Tlacotepec de Benito
Jurez con 5 991 y Zoquitlan con 6 162 UPR); los de la zona central (Puebla
con 10 975; Huejotzingo con 7 454; San Martn Texmelucan con 6, 003;
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 413
Atlixco con 4 208 UPR); as como el sureste (Palmar de Bravo con 3 689 y
Tepanco de Lpez con 2 696).
Tan slo en los 10 municipios indicados se encuentran ms de 61 mil
campesinos, cifra que representa 15.47% del total. Con esto se ve la coexisten-
cia de grupos indgenas y campesinos, en lo que se pudiera considerar como
los ecosistemas y agrosistemas ms conservados.
Pero resaltamos la distribucin de indgenas y campesinos en todos los
espacios rurales, periurbanos y aun urbanos de la entidad, porque esa pre-
sencia permite la sobrevivencia del conocimiento indgena y campesino en la
mayor parte de los hogares poblanos.
Centro
Sistema de Produccin Regin agroecolgica
Coordinador
Ocho centros
1. Traspatio En las seis regiones
coordinadores
2. Carne de caprino en pastoreo Mixteca (1) y (2)
3. Carne y lana de caprinos y ovinos Sierra Negra (2)
Sierra Norte, Sierra Negra
4. Carne y lana de ovino en pastoreo (2), (3), (4), (5) y (7)
y Sierra Oriente
Mixteca, Sierra Negra, Sierra Oriente
5. Carnes de bovinos en pastoreo (2), (3), (5), (6) y (7)
y Sierra Norte
6. Leche de vaca semiestabulada Sierra Oriente y Sierra Norte (3), (4) y (7)
7. Leche y becerro en pastoreo. Sierra Norte Media y Baja (4), (6) y (7)
8. Carne de ovino pelibuey Sierra Norte Media y Baja (4), (6) y (7)
con el paso del tiempo, dependiendo de los diferentes cultivos que tenga al
alcance el productor, de aquellos que tradicionalmente cosecha, tal como el
maz y frijol, que son los que de manera general se cultivan en esta regin.
Cada zona cuenta con gran diversidad ecolgica, y por lo mismo con una
importante cantidad de especies agrcolas, forestales y ganaderas que manejan
los agricultores como una sola especie o grupos de ellas; en ocasiones se en-
cuentran integradas en asociaciones, cultivos imbricados, al relevo o cultivos
mltiples; ganadera de pastoreo y ganadera de traspatio o bien con frutales
en reas forestales o como especies solas. Cada cultivo lleva consigo activida-
des que el propio productor realiza, como en el caso del maz.
Una de las actividades principales es la preparacin del terreno antes
de sembrar y abonar con estircol, todo esto se hace casi siempre de manera
natural. Generalmente se usan las semillas criollas, aunque muchos hacen
combinaciones de forma natural, es decir, sin el uso de maces modificados
genticamente, llamados transgnicos.
En la actualidad, los productores an combinan la siembra de maz,
frijol, calabaza, etctera, logrando as un surtido nutritivo para la tierra. Esto
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 419
3
De aqu en adelante toda la informacin de campo corresponde a 25 entrevistas rea-
lizadas con campesinos e indgenas, y en las 25 aplicadas a herbolarias de mercados
de las ciudades de Atlixco, Puebla, Acatln de Osorio, Tecamachalco, Quecholac; as
como 15 entrevistas aplicadas en las mismas zonas urbanas con personas que recono-
cieron saber, en especial, de herbolaria.
420 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
Relevantes son los costos humanos que implican las prcticas del de-
sarrollo y validacin del conocimiento campesino e indgena; la experimen-
tacin si bien ha tenido aciertos benficos, es seguro que tambin errores
garrafales que tuvieron y tienen que ver con nuevas prcticas alimenticias y
curativas, y en consecuencia con las enfermedades y la muerte de un nmero
impreciso de humanos.
No ha habido oportunidad de visualizar y documentar las fallas y los
casos de fracaso de este conocimiento y creemos que es un punto central,
porque desde nuestra ptica, esto es lo que ha sido atractivo a las grandes
trasnacionales, ya que el lanzamiento de un nuevo medicamento, por ms
que se fundamente en una prctica cientfica, tiene que ver con el ensayo y
el error, tal y como lo demuestran las estadsticas de las pruebas piloto de
una nueva medicina y los casos que han difundido los efectos negativos de
un nuevo medicamento, como lo fue el caso de la talidomida.4
Las trasnacionales valoran el conocimiento campesino e indgena, no
por su concepcin y significado, sino por su forma experimental de desa-
rrollo que es similar al suyo. Lo que le intentan robar en el fondo es el
costo de experimentacin que ya han probado los pueblos colectivos. En la
actualidad, para poner un medicamento en el mercado se ven obligados a
una experimentacin previa de varios aos. Si hay efectos secundarios en los
pacientes, los sancionados son los doctores que suministran el medicamento
y no directamente las farmacuticas, sin embargo, el trmite y el tiempo
de experimentacin para poner a la venta un medicamento implica un alto
costo para las empresas.
Beneficiario dell
B en eficiario de
conocimiento
C onocim iento CConocimiento
o n o cim iento cam p esin o ee indgena
campesino in d g en a
expropiado
expropiado
D esconocido
Desconocido BBiopiratera
io p iratera por
p o r individuos
in dividu o s
428 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
Conclusiones y recomendaciones
Con el neoliberalismo se pretende que los conocimientos de las comunidades y
la riqueza biolgica sobre la que se conoce, se conviertan en simples mercancas.
Como plantea Enrique Leff (2002), la lgica del capital pretende que las
poblaciones indgenas se reconozcan como capital humano, que resignifiquen
su patrimonio de recursos naturales y culturales (su biodiversidad) como un
capital natural, que acepten una compensacin econmica por la cesin de
ese patrimonio a las empresas transnacionales de biotecnologa.
Por eso, los movimientos campesinos e indgenas que defienden su territo-
rio, que luchan por la reapropiacin de su biodiversidad y su cultura, mues-
tran el camino que debe ser seleccionado. De hecho se trata de un esfuerzo,
que sin despreciar el frente legal porque se deben conocer las armas del enemi-
go, se traduce en una estrategia poltica de reapropiacin y de enfrentamiento
directo, a lo que Leff (2002) llama el poder de simulacin y perversin de las
estrategias globalizantes de la sostenibilidad.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 437
Bibliografa
Aguilar, Grethel, 2003. Conocimiento tradicional sobre la biodiversidad
en el Proyecto Manejo Integrado de Ecosistemas por Pueblos Indgenas y
Comunidades, http://www.ruta.org/downloads/PMIE/042004/Conoci
miento%20tradicional%20%20Grethel%20Aguilar/Conocimiento%2
0Tradadicional.DOC
Alatorre, Gerardo, 1991. Primera de tres fichas elaboradas a partir del
artculo, Ficha nm. 119 en Revista Xolocotzia, Grupo de Estudios
Ambientales AC., Mxico.
442 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
Entrevistas
Entrevista al doctor Antonio Macas Lpez. Colegio de Postgradua-
dos-Campus Puebla, Especialista en Educacin y Extensin Agrcola,
diciembre de 2005.
Entrevista al doctor Nicols Gutirrez Rangel. Colegio de Postgradua-
dos-Campus Puebla, Especialista en Fruticultura, diciembre de 2005.
Entrevista al doctor Ignacio Ocampo Fletes. Colegio de Postgradua-
dos-Campus Puebla, Especialista en Estrategias del Desarrollo Regional,
Diciembre de 2005.
Entrevista al doctor Engelberto Sandoval Castro. Colegio de Post-
graduados-Campus Puebla, Especialista en Edafologa, diciembre de
2005.
25 entrevistas realizadas con campesinos e indgenas y 25 aplicadas a
herbolarias de mercados de las ciudades de Atlixco, Puebla, Acatln de
Osorio, Tecamachalco, Quecholac; as como 15 entrevistas aplicadas
en las mismas zonas urbanas con personas que reconocieron saber, en
especial de herbolaria.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 445
Anexo I
1
El glosario se construy a partir de definiciones tomadas de diversas fuentes, pero en
algunos casos la redaccin original se modific o se redact de novo con la intencin de
facilitar la comprensin de los trminos.
* Maestra en Biotecnologa, Facultad de Qumica, UNAM. Investigadora del CEDRSSA.
** Licenciada en Sociologa, Facultad de Ciencias Polticas y Sociales, UNAM; editora.
446 Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberana Alimentaria
Biologa molecular: es una rama del estudio de los seres vivos que se ocu-
pa, mediante un conjunto de tcnicas, de molculas como el ADN,
el ARN y las protenas, de conocer su regulacin, su expresin y sus
modificaciones o ediciones.
Biopiratera: a partir de la posibilidad de patentar los diversos compuestos
producidos por seres vivos (principalmente de plantas), y ms recien-
temente el patentamiento de genes, grandes compaas farmacuticas
han registrado como propios los compuestos y los genes asociados al
conocimiento milenario de diversos grupos indgenas sobre plantas
o animales. Por tal motivo, la sociedad civil organizada de todo el
mundo maneja el trmino biopiratera para especificar el robo y la
privatizacin mediante patentes del conocimiento tradicional
asociado a seres vivos, que desde el lenguaje econmico se les llama
recursos biolgicos.
Bioprospeccin: as se llama a la actividad de bsqueda de organismos vivos
para su estudio, con el objetivo de hacer un aprovechamiento de stos,
de sus partes o de compuestos que stos produzcan.
Bioseguridad: serie de medidas de seguridad (tcnicas y legales) para hacer
un uso y manejo seguro de seres vivos, que se considera pueden brindar
algn beneficio o servicio al hombre, pero cuyo manejo requiere hacerse
con responsabilidad para prevenir efectos negativos en los ecosistemas,
en la biodiversidad y en la salud humana y animal.
En los ltimos aos, el trmino bioseguridad en Mxico y el mundo
se ha utilizado de manera muy especfica dentro del contexto de la discu-
sin sobre organismos transgnicos. Por ejemplo, el Acuerdo Multilateral
Ambiental conocido como Protocolo de Cartagena sobre Seguridad de
la Biotecnologa trata slo sobre algunos aspectos de bioseguridad en re-
lacin a organismos transgnicos vivos y su movimiento transfronterizo.
En este acuerdo, el concepto de bioseguridad ni siquiera fue introducido
en el ttulo del acuerdo, porque se utiliz el concepto de biotecnologa
para as dar referencia a seres vivos, pero ste es confuso, amplio y gene-
ral y no queda claro el asunto de la bioseguridad, mucho menos que se
trata slo de organismos transgnicos vivos, generados a partir del uso de
tcnicas de ingeniera gentica (vase definicin de biotecnologa).
Entonces, de acuerdo a lo anterior, el uso del trmino bioseguridad
que prevalece en el lenguaje cotidiano, es el asociado a organismos
transgnicos. Sin embargo, se aclara que se ha dejado de lado el uso
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 447
2
Conjunto de tcnicas para modificar el cdigo gentico o genoma de los seres vivos en
un laboratorio, que dan origen a un organismo transgnico.
Biodiversidad y Conocimiento Tradicional en la Sociedad Rural 449
Bibliografa