Demasiados Abogados - Piero Calamandrei

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CALAMANDREI, HERO, Dmasiados Abogador.

Traduccin de Joseph Xirau


(Coleccin Clsicos del Derecho, Libre& El Foro, Buenos Aires, 2003), 162 pgs.

Cuesta creer que la espkndida obra que la obra comentada, como uno de los juristas ms
comentamos haya sido escrita hace m& de ocho reconocidos de Italia; fue profesor de la Facultad
decenios. La precisin, claridad, asertividad y pre- de Jurisprudencia en Florencia, destacado procesa-
visin con que cl fen6meno del exceso de aboga- lista, de fecunda labor cientlfica.
dos es abordado, resultan ciertamente notables. La crisis que vive la profesi6n de abogado
Las reflexiones ofrecidas han de servir -qu duda en Chile azotaba a la cuna del Derecho Romano ya
cabe- como sabios consejos a los j6venes estudian- en el primer tercio del siglo pasado. De ahl que sea
tes de Derecho, abogados que recitn ingresan al conveniente detenerse a analizar el problema y, to-
mundo de los tribunales y, por cierto, a acadtmi- davfa mk a poner pronto remedio a la cada va
cm. Quid a estos ltimos sea a quienes mayor ms grave situacin examinada por Calamandrei,
utilidad reporte este libro: a los m&s j6vcncs los extrayendo aquello que sea aplicable a nuestro me-
llevar a reatkmar el sentido de su vocacin por la dio. Tal vez la Providencia permita superar el
ciencia y la investigacin jurldica, sirviendo como
guia de principios, en tanto que, a los maestros
1
consolidados, servir- para recordar la esencial fun- Se cuentan entre su prolffica produccin tradu-
cin que cumple la labor formadora y para llamar cida al espafiol: Cam&in Civik Elogio dr los juc-
CCI;Instituciones de derecho procesal civik Intm-
de regreso al camino correcto a aquellos que, por
duccidn al estudio ristcmdtico de kzs rentenciar
algn acaso, se han desviado o cansado.
cautelares; Justicia y kgalidad.
A sus treinta y un atos Piero Calaman- Para ver listado completo de publicaciones del
drei (1889-1956) fue descrito, por cl traductor de autor puede visitarse http:/lopac.unifi.it
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aprieto en que nos encontramos, precipitado dcs- leccin intelectual y moral, que el nmero de pro-
controladamente como piedra en un despchadcro. fesionales de la abogacia salga fuera de los Ilmitcs
En tres capltulos, el autor invita al lector compatibles con las finalidades pblicas de la pro-
a mirar, serenamente, pero a la vez con rigurosa fesin. Son necesarios pocos abogados y bien esco-
scvcridad, cl estado de la abogacla y la ensefianza gidos; de otro modo la utilidad social de la aboga-
del Derecho. El capltulo primero esta destinado a ca es una mentira y una ironla3.
determinar la naturaleza ltima de la profesi6n y Demos ahora una mirada a algunas de las
su rol desde cl punto de vista de la justicia, a de- consecuencias que, segn el autor, provoca cl exce-
tectar la causa ltima de su mal venido estado, so de abogados. Anota en primer lugar el decai-
desarrollando en ltimo termino las consecuencias miento de la condicin econmica de quienes ejer-
de tan indeseable situacin. Por su parte el capltu- cen la profesin, situndola, a su vez, como
lo segundo -que nos ha parecido el ms atractivo- concausa del testo de los efectos del fenmeno dcs-
se refkre a las mltiples causas que han llevado a crito. Ante la abundancia de litigantes, los pleitos
aumentar innecesaria y descomunalmente el n- encomendados a cada uno han disminuido nota-
mero de abogados. Finalmente, el tercer capitulo blemente, produciendo la consiguiente merma en
propone algunas soluciones, dejando claro que su- los ingresos que ello, de suyo, supone. Y si hay
perar la dificultad -en palabras del autor- pasa algo que puede hacer olvidar la rectitud, incluso a
necesariamente por una renovacin moral de la hombres habitualmente honestos, es la estrechez
profesi6n. econmica. Claro est que la segunda y ms repu-
Cuando una persona comn es interroga- diable consecuencia apuntada por Calamandtei, es
da acerca de la funcin de un abogado, lo ms el decaimiento moral de la profesin, que lleva a
probable es que conteste: estdn para defender los muchos a mentir descaradamente y a incurrir en
intereses de sus clientes. Y eso, en cierta manera, innumerables prcticas refiidas con la kica, movi-
es efectivo. Todo quien ejerza libremente la ptofe- dos por el afn de ganar unos pocos pesos. Incluso
sin SC dedica, precisamente a eso, a representar hay ms de alguno que cobra indecorosos honora-
ante los tribunales de justicia las posiciones de rios, realizando verdaderos ofcrronrs con tal de dar
quien ha conuatado sus servicios. La cuestin ra- caza a un cliente.
dica en determinar si cl abogado existe tan solo Otra de las secuelas es la decadencia inte-
pata ello, a que precio y si, adems, debe ser servi- lectual de procuradores y abogados. No podia set
dor de la justicia o no, cuestin que determinar el de otra manera: la facilidad con que algunas Facul-
carcter pblico de la profesin. tades entregan la licenciatura es sinnimo de au-
Respondiendo a la interrogante enuncia- sencia total de selecci6n de los mejores hombres y
da, Calamandrei afirma que la funcin del aboga- de falta absoluta de rigor intelectual. Creemos que
do tiene carcter eminentemente pblico. El letra- este es uno de los aspectos que ha de ser atacado
do, agrega, aparece como un elemento integrante con celeridad c inclemencia si queremos poner
de la organizacin judicial, como un rgano inter- coto al problema que, como a la Italia de 1920,
medio puesto entre cl juez y la parte, en el cual el afecta a Chile desde hace casi una dtcada. Debe-
inters privado de alcanzar una sentencia favorable mos volver a formar abogados que acten en su
y el intcr& pblico se concilian*. vida profesional no solo movidos por cl esplritu de
Esclarecida la importancia que reviste lucro -que bien encauzado no criticamos-, sino
para cualquier sociedad contar con buenos aboga- tambikn por el afn de obrar con justicia y al sctvi-
dos, pasa Calamendrci a exponer las perniciosas cio del Derecho. Como dice el autor, el abogado
consecuencias de un nmero excesivo de abogados. noble defender sus causas no solo por amor al
Reproduciendo literalmente sus palabras podemos lucro, sino tambikn por amor al arte.
decir que el aumento desmesurado e inorgnico de Hemos dicho ya, que el capitulo segundo
abogados destruye todas las ventajas de la aboga- est destinado a explicar las causas del peligroso y
cfa libre; y el problema fundamental de esta con- triste momento que atraviesa la profesin. Este es
siste, pues, en impedir, a trav& de una severa sc-
3 P. 32. En cl original, la ltima frase transcrita
1 Pp.14-15. aparccc en cursiva.
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atribuido, en buena medida, a la facilidad con que A pesar de la indiscutible calidad del cuerpo de pro-
se obtiene cl titulo de abogado y al poco esfuerzo fesores que tuvimos el privilegio de tener, ms de
que implica. En efecto, ante cl imperativo que los alguna vez habremos experimentado lo mismo que
jvenes sienten por lograr un cart6n, muchas veces Calamandrci expresa con las siguientes palabras:
eligen seguir estudios de Derecho, por descarte, Cuando yo era estudiante de Jurisprudencia en una
ms que por vocacin hacia la ciencia jutldica. universidad donde, sin embargo, habla muchos pro-
Enunciada una de las causas que el autor fesores que me eran queridos y admirados, me ocu-
considera ms importantes, pasa, enseguida, a ana- rrla a menudo preguntarme para qut scnan las lec-
lizar cada uno de los elementos involucrados. ciones de la ctedra, y me ha& la ilusi6n de que a
Hace, en este punto, interesantisimas reflexiones esta pregunta ingenua mis profesores habrlan sabido
relativas a los estudiantes, las lecciones, los exAme- contestar satisfactoriamente. Hoy, que ya no miro la
nes, los profesores, la prctica forense y la calidad clase desde los bancos del estudiante, sino desde la
de los licenciados. Intentar un resumen de cada cdtedra del profesor, el mismo problema se me pre-
uno de dichos aspectos desborda nuestros objeti- senta de nuevo, ms vivo y ms peno& por cl
vos y estada muy lejos de reemplazar la lectura del sentido de la responsabilidad; pero la respuesta tam-
texto, de manera que nos limitaremos a manifestar poco se encontrarlan~.
lo que ms ha llamado nuestra atencin. El sistema de clases expositivas en que el
Haber dejado las aulas del pregrado hace alumno permanece distante y sin participar, ha de
tan solo unos aos, nos permite comprobar la ser desterrado de las aulas, si cl objetivo de las
exactitud de los comentarios de Calamandrei rela- Facultades de Derecho es formar verdaderos juris-
tivos a la composici6n de los cursos de Derecho. tas, capaces de estudiar las leyes por sl solos, de
Los alumnos -dice- son hijos de abogados que tie- razonar y de ofrecer soluciones a los casos que a su
nen asegurado un futuro profesional en los cstu- conocimiento llegan. Todo esfuerzo que en tal scn-
dios de sus padres, muchachos intelectualmente tido se realice ser positivo y en el mediano plazo
bien dotados, vidos de satisfacer su inquietud in- rendird fruto.
telectual; miembros de familias ricas, que van a la Poco auspiciosa es tambikn, la descripcin
universidad a obtener un lindo tftulo con el cual del metodo de evaluacin. Los profesores tienden
adornar la oficina desde la que algn dia adminis- a relajarse, exigiendo cada vez menos al alumno,
trarn los negocios de la familia; y por j6venes como con temor a ser verdugos de inocentes jvc-
que, no muy seguros de su vocacin, han decidido nes que luchan por alcanzar cl sucho de ser aboga-
matricularse en una carrera que goza an de cierto dos. En absoluta concordancia con cl autor, tcnc-
reconocimiento social y que, creen, les asegurar mm la conviccin de que lo aconsejable es
cierto Cxito econ6mico4. De estos cuatro tipos de mantener altos niveles de exigencia que hagan di&
alumnos se compone un primer aho de Derecho, cil obtener el grado de licenciado en ciencias jurl-
lamentablemente no sicmprc abundan los que per- dicas, nico camino para asegurar la competencia
tenecen a los dos primeros. Lamentablemente, de los nuevos profesionales del Derecho.
porque suelen ser aquellos quienes con mk intcrts En no mejor pie quedan las prcticas pro-
estudian y asisten a las aulas; los dems, en tanto, fesionales. Estas no son ms que un mero tramite
preparan cada prueba y examen como un obstdcu- que se aprueba con extrema facilidad. En Chile
lo ms que deben sortear para lograr el tkulo que -salvo honrosas excepciones- no pasan de ser la
fueron a buscar. fatigosa tarea de concurrir tuamo o cinco dlas a la
Especialmente llamativa nos ha parecido la semana durante media jornada a un consultorio de
crkica realizada a la forma de impartir las lecciones. la Corporacin de Asistencia Judicial, a prestar
servicios a personas de escasa preparacin, a los
4 Creemos que nuestra Facultad de Derecho se li- que fcilmente sc dan excusas que a un cliente
bra de este mal gracias a la alta exigencia acadt- particular jamh se ofrecerlan.
mica que su cuerpo de profesores impone a los Finalmente, dice, a la hora de buscar una
alumnos. Sin embargo. el conta.cto con estudian- fuente de trabajo solo unos pocos logran triunfar
tes de otras universidades, nos permite afirmar
que lo sealado por Calamandrei es la t6nica en
muchas de ellas. 5 P. 91.
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en el ejercicio libre de la profesin; los ms llegan ingks Bago6 resume la decadencia moral e inte-
a dedicarse a ella despus de haber sido desechados lectual de la aboga& italiana: La ms popular de
en servicios pblicos o empresas, sin llegar jamds a las profesiones civiles es la de abogado; e Italia estb
alcanzar el kxito. He aqul otra de las cuestiones llena de abogados, de procuradores y de leyes.
que urge solucionar. Pero, desgraciadamente, justicia hay muy poca.. .
C6mo hemos de poner fin a este problema La profesin de abogado, como tantas otras, se re-
es la pregunta que debemos co premura responder. siente mucho del gran nmero de los que la ejet-
Algunos criterios brinda Calamandrei en el ltimo ce. De lo cual se deriva que, aun habiendo mu-
capitulo: modificar el astema de enscfianza, aumen- chos abogados y procuradores honrados y
tar la exigencia en los exmenes, corregir los vicios concienzudos, hay tambin muchos que para vivir
de la prctica profesional, fortalecer los colegios se ve obligados a no tener ni una ni otra de esas
profesionales y, fundamentalmente, recuperar la cualidades.
moralidad c el foro ye el ejercicio de la aboga&. El llamado es a ser parte del grupo de
Este ltimo aspecto cs ciertamente uno de los ms aquellos abogados que ejercen co honradez y jus-
relevantes: la crisis moral del mundo occidental no ticia su oficio, que ama genuinamente su profe-
afecta solamente a la aboga&. Nuestros tiempos, sin, que dedica su vida al servicio del Derecho y
en que bajo las consignas de la tolerancia, el plura- que se mueve no solo por el afn de enriqueci-
lismo y la libertad sin fimitc, favorecen los vicios de miento.
la ambicin y la falta de honrada que contribuyen
a causar el descrkdito de nuestra ptofesi6n. JAIME BARRIENTOS R.
Para terminar, valga tocar una campana Ayudante de Derecho Romano
de alerta mediante las palabras co que en 1912 el Pontificia Universidad Catlica de Valparalso

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