El País de Las Lágrimas - Mario Escobar PDF
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die Mutter 3.
E. Schefer, Liebesbrevier.
NDICE
Copyright
Prembulo
Proemio
Prefacio
Captulo 1. Camino
Captulo 3. La sangre
Captulo 4. El baile
Captulo 8. El maquis
Peroracin
PREMBULO
La ciudad de los muertos
continuaba tal y como la dej hace
ms de veinticinco aos.
PROEMIO
Seor Artola:
Le escribo esta carta sin mucha
esperanza y con poco
convencimiento. Pero antes de
invisible.
Un afectuoso saludo,
Hola Pedro:
Te envo un archivo adjunto. Este
es el libro que te coment. He
estado todo el fin de
semana transcribindolo en el
ordenador. No es muy largo, algo
menos de ciento
Juan Artola
a ti como coautor.
Hasta pronto.
Pedro Camus
Hola Pedro:
es la neutralidad y objetividad.
Un saludo,
Juan
Hola Juan:
Un saludo.
Pedro
Hola Pedro:
Juan
SMS
un abrazo
Remitente:
PedroMovil
+34636773433
SMS
un abrazo.
Remitente:
JuanArtola
+34689898945
Un abrazo,
Juan
A LA PRIMERA EDICIN
convertirse mgicamente en
vivencias. El pas de las lgrimas
forma parte de esas
Juan Artola.
INTRODUCCIN
A LA TRIGSIMO SEGUNDA
EDICIN
Juan Artola.
CAPTULO 1
EL CAMINO
***
viera su padre.
estas?
march contigo.
No me pesa su cuerpo, el
agotamiento tiene de bueno que
duerme el cuerpo. Es
recipiente de tu existencia, la
lmpara sin luz de tu ser. No me
queda ni eso de ti; slo
brutalmente.
vagabundas harapientas.
Buscaremos refugio debajo de los
rboles que no entienden
de riqueza ni de pobreza, porque
todos son iguales. S que no
dormir, soar es vivir
***
ABRAZOS Y BESOS
reprimidos, la ansiedad y la
impotencia de todo aquello que se
nos escapa de las
manos. Mis gestos son rpidos,
para imprimir en mi alma la
seguridad que me falta, la
***
ests desaparecido.
No le encerraron ni en el calabozo.
Herminia hace lo posible por
sobrevivir. l no lo
sabe, pero ella se acuesta con el
sastre donde trabaja de criada.
Pobre Herminia, dej
ms ellos mismos.
***
CAPTULO 3
LA SANGRE
***
Mam!
Ah!
vuelve a sonrer.
Gracias le contesto.
venda se ha transformado en
marrn.
le hubiesen envejecido
repentinamente . Todos han
muerto. Vengo en direccin
desconocido, un fantasma y se
transforma en otro hermano ms de
la tristeza.
aguijonear.
La sangre se desparramaba
como el roco. Los cuerpos
reventaban y dejaban
a mi alrededor y el palpitar de un
corazn inmenso, martille dentro
de mi cabeza.
atestadas de muchedumbres, el
dolor se extenda como una inmensa
mancha de aceite,
impregnndolo todo.
La muerte ya no se aposenta en
un solo lugar. No busca sus presas
entre los
un coche desbaratado,
quejumbroso, en el que se ha
convertido el cuerpo de belleza
puede soportar.
CAPTULO 4
EL BAILE
***
desaparecer.
felicidad.
mano a la nia.
Que linda.
Las dos muchachas sonren y
rodean a Fortaleza. Tiemblo y
estiro de la nia hasta
Por qu cantan?
abrazarla y de atravesarle el
corazn con un cuchillo. Por qu
su hijo ha sobrevivido?
esperanzas: La fe.
llorando).
llorando).
en este campo
llorando).
CAPTULO 5
15 de septiembre, 1936.
Querida esposa,
no veo. Si lo hubiera no te lo
pedira.
21 de marzo, 1937.
Querida esposa,
en unas semanas.
Da un beso muy grande a los nios.
Con amor.
Julio, 1937.
Querida esposa,
2 de octubre, 1937.
Querida esposa,
clavaban; su miedo me ha
horrorizado. Dos tiros y el chico,
no era ms que un nio,
ha abierto la boca para decir algo,
sorprendido por la muerte y en un
ltimo suspiro se
avanzando y no hundirnos en el
barro y la sangre. No s por qu te
cuento esto. Por
qu aado horror a tu horror,
muerte y ms muerte. Cuando nos
han dejado descansar
me ha quedado nada en el
estmago.
expresin; el sinsentido, la
bochornosa mensajera de los
ideales. Todos iguales, tan
6 de enero, 1938.
Querida esposa,
purificador de la muerte me
fulmine, en ese instante, si
permanezco, si logro cruzar
todos esos glgotas, s que tu
estars all, siempre a mi lado.
23 de marzo, 1939.
Estimada Seora:
Viva la Repblica!
Capitn Zaragoza
CAPTULO 6
SOLEDAD
***
Me levantars en volandas y yo
girar como una nia sin parar de
rer? Me besars,
En la ltima encrucijada he
escuchado algo diferente. Voces
alegres que viajaban
un escalofro y ya no pienso.
CAPTULO 7
de los sentimientos. No te
preocupes, ahora camino yo junto a
ella.
***
Me acuerdo de la ltima
pantomima, del ltimo desfile de
requets, con sus boinas
despist y me vi en medio de la
marcha. Me par e intente pasar
desapercibida, agach
la cabeza, respir hondo y esper.
Vi unas botas que se acercaban y se
paraban
No se asuste seora.
El falangista ha sacado una
chocolatina de uno de sus bolsillos
y se la ha dado a la
la ha devuelto al hombre.
verle.
No, gracias.
de nuevo.
y feliz.
Feliz?
Las palabras se me han escapado de
los labios. El hombre me ha
observado unos
tambin a su madre.
cerrado la puerta.
No lo veo, seor.
Qu va a hacer en su pueblo?
Servir? Antes cogern a alguna
moza joven, sin
hijos y sin obligaciones.
Madrid Se me escap en un
suspiro.
EL MAQUIS
sufrimientos y dolores. Yo
permanezco errtica, taciturna y
medio dormida visualizo
***
Un maqui, eso me dijeron. Es uno
de ellos. De esos fantasmas que
recorren las
Me lo refiri la Sarmiento. Tu
hombre est en la sierra, lo vi un
pariente tuyo.
Un hermano de tu madre. El pastor
viejo . Eso me explic. Me
temblaron las
nombre?
Cario le contest , tu
padre est vivo por alguna parte,
pero si estuviera
pupilas.
murcilagos.
putas.
Me abrac al chal que haba puesto
sobre mi viejo camisn y arrastr a
los nios
A m qu me importa, mujer. No
tenemos todo el da.
***
CAPTULO 9
SUEOS DESDE LA CRCEL
reconocido y un escalofro me ha
recorrido la espalda. Con gestos me
ha sealado la
silla y con la boca medio torcida ha
sonredo. Las tres hemos sonredo.
Despus me
respaldo. Al agacharme me he
cruzado con sus ojos encendidos
como los de un nio
la Noche de Reyes.
No responde. Claro, la
mamuasel no tiene tiempo para
hablar con la autoridad.
Est pensado en su macho. Si fuera
por m ya te habra dado el paseo,
pero tus cuatro
dados.
mos.
todo.
Uno de los guardias civiles me
arrastra por el suelo empapado en
sangre. Mis pies
Tiene un espejo?
El hombre saca del bolsillo un
minsculo espejo. Me enfoca la
cara y me espanto al
interminables dilogos t
permanecas callado, mudo. No me
hacen falta tus palabras
para acompaarme, los grandes
espacios vacos que hay entre ellas;
los puntos y
agotamiento y he arrastrado a la
nia conmigo. Dnde estas,
querido esposo?
***
pasillo.
CAPTULO 10
LA CIUDAD
cncer. El tratamiento ha
comenzado a perder su efecto y t
regresas a tu mutismo y
escapas, quiero imaginar, hacia el
Cielo del que tantas veces me has
hablado.
***
Me siento y la calle me da ms
miedo que los caminos solitarios y
el campo abierto.
Un desconocido se acerca a m. No
me he dado cuenta que me caa
hasta que he
aturdida.
Seora, yo la conozco.
Se encuentra mejor? Me
reconoce ahora?
Qu le ha pasado? Cmo se
encuentran tiradas en la calle?
La vida.
Por qu no va a recibirla?
Qu cosas tienes.
usted.
Ver al gobernador.
Pues si quiere ver al
gobernador, no hace falta que me
explique ms. Conozco a
pregunt.
Buenas tardes.
La voz me sobresalt, me di la
vuelta y all estaba doa Asuncin,
con su cara
Lo siento.
nuestros maridos.
Pero seora
***
EL SEOR GOBERNADOR
su cuerpo se colapsara. Su
respiracin rompa las paredes de
la habitacin y
curiosidad.
Slo la mujer.
responder.
Seor Gobernador
Seor Gobernador. No s si mi
caso es ms importante que el de
toda esa gente.
como yo.
S.
Entiendo.
sierra.
Prisin?
Y lo sabe?
S, seor.
ms y le pregunt:
Qu ha pasado? Qu te ha
dicho el gobernador? Me mir y
sac del bolsillo el
sobre.
Lleva esto a tu pueblo y
entrgaselo a la Guardia Civil.
Qu es?
El gobernador me ha ordenado
expresamente que te d este sobre,
me ha
Pero, qu contiene?
acatar su veredicto.
Me asustas, Marcos.
***
CAPTULO 12
LA CARTA CERRADA
***
indiferente.
en un buen lo.
Y qu vas a hacer?
sorpresa y alivio.
familiares, de vecinos, de
miembros de la iglesia a la que
asista mi madre y de un
frases hechas.
CAPTULO 13
MADRID
el retrato de mi abuela.
***
escapar.
revolotean mariposas en el
estmago de pensarlo. Nunca
montamos juntos en tren.
pauelo anudado.
S.
que aceptarme.
Debi de ser usted muy guapa.
La entiendo.
me encuentre.
Quiere morirse?
No.
La anciana se apaga de repente y
vuelve a inclinarse hacia el suelo.
Siento lstima
de nuevo y me dice:
nadie.
No s adnde me dirijo. He
preguntado varias veces hasta que
un buen hombre nos
EPLOGO
poco la comitiva se ha
desmenuzado hasta dejarme sola.
Les he dicho a mis hermanas
mismo sendero.
PERORACIN
Poco antes de que se reimprimiera
esta ltima edicin me llegaron
noticias sobre la
mi abuela y de mi madre.
cuando me encontraba en el
aeropuerto recib una llamada del
hospital. No era ella, se
de rescatar la memoria de mi
familia.
Eternamente agradecida.
madre.
no?
Document Outline
Copyright
ndice
Nota del autor
Prembulo
Proemio
Prefacio
Introduccin a la primera
edicin
Introduccin a la segunda
edicin
Captulo 1. Camino
Captulo 2. Abrazos y besos
Captulo 3. La sangre
Captulo 4. El baile
Captulo 5. Cartas desde el
frente
Captulo 6. Soledad
Captulo 7. El pas de las
lgrimas
Captulo 8. El maquis
Captulo 9. Sueos desde la
crcel
Captulo 10. La ciudad
Captulo 11. El seor
gobernador
Captulo 12. La carta cerrada
Captulo 13. Madrid
Eplogo
Peroracin
Table of Contents
1.
Copyright
Nota del autor
Prembulo
Proemio
Prefacio
Introduccin a la primera edicin
Introduccin a la segunda edicin
Captulo 1. Camino
Captulo 2. Abrazos y besos
Captulo 3. La sangre
Captulo 4. El baile
Captulo 5. Cartas desde el frente
Captulo 6. Soledad
Captulo 7. El pas de las lgrimas
Captulo 8. El maquis
Captulo 9. Sueos desde la crcel
Captulo 10. La ciudad
Captulo 11. El seor gobernador
Captulo 12. La carta cerrada
Captulo 13. Madrid
Eplogo
Peroracin
INTRODUCCIN
1