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La sangre de Cristo tiene poder

Mateo 26.26-28

Oyeron: La sangre de Cristo tiene poder? Cuntos lo creen?
Est bien. Ahora slo es necesario saber: Poder
Para qu? Para qu tiene poder la sangre de Cristo?
Tiene poder para bendecirme?
Tiene poder para protegerme de mis enemigos?
Si cubro a mis hijos con la sangre de Cristo, les estoy evitando
accidentes?
Puedo cubrir un negocio con la sangre de Cristo para que vaya
bien?

Todas estas cosas se oyen y se leen en las redes sociales. Y me
han pedido que hable de ellas.

Muchas personas usan la sangre de Cristo como un amuleto.
Como una pata de conejo. Como una herradura de siete clavos.
Son correctas estas enseanzas? Tienen fundamento bblico?

Mucha gente est llena de supersticiones, y cuando se
convierten, no se desprenden de ellas, sino que las traen a su
nueva fe, generando nuevas doctrinas que no estn en la Biblia.

stos, en verdad, no se han convertido del todo, sino a medias.
Desgraciadamente, esto ocurre tambin entre quienes han
llegado al ministerio.

Hay pastores que aun arrastran ciertas posturas que no estn
fundamentadas en el estudio serio de la Palabra de Dios sino en
sus tradiciones personales.

Por ejemplo, he odo a buenos predicadores exponer doctrinas
catlico romanas como si fueran enseanzas de la Biblia.
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Absolutamente convencidos de que estaban transmitiendo una

verdad bblica, cuando no lo era.

O a un pastor citar Romanos 5.12 para afirmar que ese pasaje
ensea que el ser humano hereda la naturaleza de pecado de sus
generaciones anteriores. Vayamos al pasaje para ver si es eso lo
que dice.

El deber de un pastor es ensear, pero la verdad, No lo que ha
recibido de los hombres, sino de Dios.

Romanos 5.12 Por tanto, como el pecado entr en el mundo por
un hombre, y por el pecado la muerte, as la muerte pas a todos
los hombres, por cuanto todos pecaron.

Qu es lo que Pablo dice aqu que se transmite? La muerte. Y
cundo? Cuando han pecado.

Dice Pablo que la naturaleza pecaminosa pas a todos los
hombres? No, dice la muerte. Segn Romanos 6.23 la muerte es
la paga por el pecado.

Por eso dice: as la muerte pas a todos los hombres, por
cuanto todos pecaron.

1Juan 3.4 Todo aquel que comete pecado, infringe tambin la ley;
pues el pecado es infraccin de la ley.

Hasta que no se infringe la ley no hay pecado. Est clarsimo.
Por qu entonces tantos y tantos se equivocan en esto? Porque
aceptan una doctrina como verdad sin cuestionarla. Sin estudiar
la Palabra de Dios, para comprobarla.

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Estos errores son mucho ms frecuentes de lo que podramos

imaginar, porque cuesta librarse de las viejas influencias que
arrastran del pasado.

Cuando un cristiano afirma que la sangre de Cristo le protege de
todo mal, est afirmando algo que no tiene fundamento en la
Biblia, sino en las supersticiones humanas. Est dando un poder
a la sangre que no tiene en s misma.

Gracias a Dios, tenemos al Espritu Santo y la Palabra de Dios
para guiarnos a toda la verdad.

La Biblia afirma que la sangre de Cristo fue derramada Para
qu? Mateo 26.28 Para la remisin de los pecados.

Remisin significa perdn, cancelacin. Por medio de la sangre
de Cristo Dios estaba perdonando nuestros pecados. Cancelando
la deuda que tenamos con l por causa del pecado.

No encontraremos ni uno solo pasaje que relacione la sangre de
Cristo con la proteccin, o la seguridad. Cubrir con la sangre de
Cristo a nuestros hijos o nuestras finanzas, es una falsa doctrina.
Es decir, no es verdad. No est basada en lo que la Biblia ensea.

Si quieres la proteccin de Dios, para ti o tus hijos, debes andar y
ensearles a andar en el temor de Dios. Pues, escrito est: El
ngel de Jehov acampa alrededor de los que le temen, y los
defiende. Salmo 34.7.

Si deseas que Dios bendiga tus finanzas, s generoso. Porque
escrito est en Lucas 6.38: Dad, y se os dar; medida buena,
apretada, remecida y rebosando darn en vuestro regazo;
porque con la misma medida con que meds, os volvern a medir.

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As es el reino de Dios. Es una paradoja. Cuanto ms compartes,

ms recibirs.

2Corintios 9.6-8 Pero esto digo: El que siembra escasamente,
tambin segar escasamente; y el que siembra generosamente,
generosamente tambin segar. 7Cada uno d como propuso en
su corazn: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al
dador alegre. 8Y poderoso es Dios para hacer que abunde en
vosotros toda gracia, a fin de que, teniendo siempre en todas las
cosas todo lo suficiente, abundis para toda buena obra;

La sangre de Cristo siempre est relacionada en la Biblia con el
pecado del hombre, nunca con la proteccin o la bendicin
material.

Por qu entonces algunos estn tan convencidos de que
pueden cubrirse con la sangre de Cristo y que nada malo les
ocurrir? La razn es que se toman pasajes del antiguo pacto y se
trasladan al nuevo pacto, cometiendo as un error de
interpretacin que lleva a falsas doctrinas. No se debe mezclar
nada del antiguo pacto con el nuevo.

Hay quien toma xodo 12.22-23 Debemos entender por este
pasaje que la sangre de Cristo nos protege de todo mal? Desde
luego que no. Este es un claro ejemplo de texto histrico, no
doctrinal.

Hay que aprender a diferenciar unos de otros. Un texto histrico
es una ventana al pasado. Un pasaje que nos dice algo que
ocurri pero, no necesariamente que debamos repetir.

Un texto doctrinal es un mandamiento de Dios para nuestras
vidas. Un pasaje que nos dice algo que debemos tener en cuenta
o hacer.

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Confundir un texto histrico como doctrinal, lleva a multitud de

personas a no entender la verdad de la Palabra de Dios. Pero
claro, hay quien quiere saber sin estudiar.

Si adems le sumamos Hebreos 9.13-14, algunos creen ver aqu
como que el autor de Hebreos estuviera diciendo que si la sangre
de los toros y de los machos cabros tenan poder, mucho ms la
sangre de Cristo.

Pero debemos preguntarnos: Para qu es que tena poder la
sangre de los toros y machos cabros? Para santificar, para
perdonar pecados. Lo cual era sombra de lo que haba de venir.

Qu es lo que haba de venir? El Cordero de Dios que quita el
pecado del mundo. Como est escrito en Hebreos 10.11-14: Y
ciertamente todo sacerdote est da tras da ministrando y
ofreciendo muchas veces los mismos sacrificios, que nunca
pueden quitar los pecados; 12pero Cristo, habiendo ofrecido una
vez para siempre un solo sacrificio por los pecados, se ha sentado
a la diestra de Dios, 13de ah en adelante esperando hasta que
sus enemigos sean puestos por estrado de sus pies; 14porque con
una sola ofrenda hizo perfectos para siempre a los santificados.

La sangre de Cristo tiene poder para limpiar las conciencias. No
dice para protegerte de tus enemigos, o bendecirte con
prosperidad material. Nada de eso es verdad.

Les voy a leer una frase de (Madre Catalina Aurelia, Fundadora
de las Hermanas Adoradoras de la Preciosa Sangre) "TODOS LOS
DEMONIOS UNIDOS SON IMPOTENTES CONTRA AQUELLOS QUE
SE CUBREN CON LA DIVINA SANGRE..."

Segn la Biblia la Sangre de Cristo nos limpia de todo pecado. Ese
es el poder de la sangre de Cristo. Para eso fue derramada. No
para protegernos de los demonios.
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Si quieres protegerte de los demonios, como est escrito en
Santiago 4.7: Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huir de
vosotros.

En tiempos de los cruzados, algunos buscaban el santo grial, el
cliz con la sangre de Cristo, porque decan que quien pudiera
beberla tendra el poder de Dios y la vida eterna. Algo realmente
absurdo y sin ningn fundamento.

No es el poder de Dios lo que debes buscar, sino al Dios de
poder. Si quieres vida eterna, deposita tu fe en la obra de Cristo
en la cruz del calvario. Porque, como est escrito en Juan 5.24 De
cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me
envi, tiene vida eterna; y no vendr a condenacin, mas ha
pasado de muerte a vida.

Todo lo dems es fruto de las supersticiones que sobre la sangre
de Cristo se han levantado. Todo mentira. La Palabra de Dios es
la base de la fe cristiana.

El apstol Juan interpret correctamente a Jess cuando
escribi: Si decimos que tenemos comunin con l, y andamos en
tinieblas, mentimos, y no practicamos la verdad; 7pero si
andamos en luz, como l est en luz, tenemos comunin unos con
otros, y la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado.
1Juan 1.6-7.

427 veces se menciona la sangre de Cristo en la Biblia. As que no
es un tema sin importancia. Sin embargo, ni una de esas veces se
menciona para recibir proteccin, ni para cubrir a los enfermos,
ni para echar fuera demonios, ni bendecir negocios, sino para el
perdn de los pecados.

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Ninguno de los discpulos de Jess us su sangre del modo que

hoy algunos lo hacen. Como un mantra mgico que les protege
de todo lo malo.

Como est escrito en 1Pedro 1.18-19 sabiendo que fuisteis
rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de
vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata,
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sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin
mancha y sin contaminacin.

Quiero invitarles a escudriar las Escrituras, como est escrito en
Efesios 4.14-15. para que ya no sean nios fluctuantes, llevados
por doquiera de todo viento de doctrina, por estratagema de
hombres que para engaar emplean con astucia las artimaas
del error, 15sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en
todo en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo.

Asegrate de que lo que ests creyendo tiene fundamento
bblico. No propagues mentiras. Afrrate a la verdad de Dios y
deja las mentiras de los hombres. Y Dios te bendecir.

De qu nos sirve conocer la verdad si no caminamos a su luz?

Ahora, vamos a recordar una vez ms, porqu fue necesario que
la sangre de Cristo fuera derramada. Porque ramos pecadores y
nuestros pecados haban hecho separacin entre Dios y
nosotros.

Isaas habla de esto en el captulo 59.1-2 cuando dice: He aqu
que no se ha acortado la mano de Jehov para salvar, ni se ha
agravado su odo para or; 2pero vuestras iniquidades han hecho
divisin entre vosotros y vuestro Dios, y vuestros pecados han
hecho ocultar de vosotros su rostro para no or.

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Por esa razn fue necesario que Cristo Jess se diera a s mismo
en rescate por todos, de lo cual se dio testimonio a su debido
tiempo. 1Timoteo 2.6.

Nosotros estamos hoy aqu, para rememorar la ltima cena de
Jess con sus discpulos en la que instituy este rito sagrado,
justamente para que recordsemos su sacrificio en nuestro
favor.

Pr. Nicols Garca