La Ética Profesional Como Religación Social
La Ética Profesional Como Religación Social
La Ética Profesional Como Religación Social
Resumen
A partir de una descripcin sinttica del estado del arte de la investigacin en el campo de
la tica profesional y de los resultados preliminares del "Proyecto interuniversitario sobre
tica profesional" en el que participan 15 universidades del pas, el artculo plantea el
concepto de religacin social, desarrollado por Edgar Morn (2005), como un elemento que
puede ayudar a comprender la tica profesional desde una perspectiva compleja. Asimismo,
puede enriquecer los trabajos de investigacin sobre el tema con una perspectiva que
contemple el fenmeno tico en las profesiones desde una visin holstica, dialgica y
recursiva que est indisolublemente ligada a los dems deberes de religacin humana. El
artculo propone trascender la visin de valores profesionales como enfoque investigativo,
y acercarse al fenmeno de la tica profesional desde el entramado complejo que constituye
la toma de decisiones profesionales en el mundo de crisiscambioglobalizacin de este
siglo XXI.
Palabras clave: tica, tica profesional, valores profesionales, complejidad, Edgar Morn.
Las instituciones que participan desde el ao 2006 en esta investigacin son: Universidad
Autnoma de Baja California, Universidad Autnoma del Estado de Morelos, Universidad
Autnoma de Nuevo Len, Universidad Autnoma de Sinaloa, Universidad de Guanajuato,
Universidad de Yucatn, Universidad Jurez Autnoma de Tabasco, Universidad de
Monterrey, Universidad Michoacana de San Nicols de Hidalgo, Universidad Autnoma de
Tamaulipas, Universidad Autnoma de Chiapas, CETYS Universidad (de Ensenada, Baja
California), Universidad Veracruzana, Universidad Iberoamericana Puebla (UIA Puebla) y
Universidad Nacional Autnoma de Mxico.
El Proyecto ha venido explorando, a lo largo de tres aos, las competencias y los rasgos de
la tica profesional entre los universitarios de mayor nivel acadmico, que son los docentes
y estudiantes de posgrado, a partir de la aplicacin de un cuestionario elaborado y validado
por la Dra. Hirsch en universidades espaolas y en la UNAM.
Esta definicin tiene claramente expresada la dimensin tica que est implcita en todo
quehacer profesional y el sentido social cooperativo que define a toda actividad profesional.
La profesin es, por definicin, una actividad tica que busca construir un bien especfico
en la sociedad, un bien que es indispensable para poder llamar a la sociedad, "sociedad
humana". Este ejercicio precisa el concurso de una comunidad de profesionales que se
identifiquen y que construyan una identidad social.
Pero la realidad actual de la formacin profesional parece ser otra. En efecto, la formacin
profesional parece ms bien ser parte del problema y no parte de la solucin al "largo ciclo
de decadencia" (Lonergan, 1999; p. 284) de nuestra civilizacin.
La triste realidad de las universidades es que, como afirmaba Gorostiaga estn formando
"profesionales exitosos para sociedades fracasadas".3 En este sentido parece ser que no se
encuentra operando en la realidad de los profesionistas una visin tica de la profesin,
puesto que no se est buscando el ejercicio de una actividad social cooperativa, sino de
prcticas altamente competitivas. Tampoco se est orientando hacia la construccin de un
bien especfico que la sociedad requiere, sino hacia el beneficio econmico personal de los
grupos que tienen acceso a la formacin universitaria.
La tica profesional entendida como esta permanente indagacin que busca mejorar
cualitativamente el grado de humanizacin de la vida social e individual es una actividad en
la que la praxis profesional, el discurso sobre esa praxis y la reflexin filosfica y
sociolgica sobre ella estn inseparablemente unidos (ver Figura 1).
El proyecto de investigacin se ubica en el centro de este bucle, al perseguir la indagacin
acerca del discurso de los estudiantes y profesores de posgrado todos ellos profesionales
en ejercicio acerca de lo que consideran que debe ser un "buen profesional".
La pregunta abierta Cules son, segn su opinin, los cinco rasgos principales que definen
a un buen profesional?, se responde de distinta manera, desde las perspectivas de los sujetos
encuestados en las 15 universidades que participan en el proyecto y las 12 que
contribuyeron con un captulo en el libro coordinado por Hirsch y Lpez Zavala (2008) que
presenta los resultados preliminares de la investigacin. Las respuestas diversas parecen ser
altamente coincidentes con el sustento y el discurso filosficopedaggicoticosocial que
plantean los idearios de cada una de las universidades y con el contexto en el que se realiza
la formacin de posgrado en dichas instituciones.
Se puede decir, entonces, que a partir de las definiciones y los modelos de cada institucin,
se han ido construyendo representaciones sociales (Moscovici, 2001) que identifican las
respuestas de los profesores y estudiantes de cada universidad ante esta pregunta abierta. Es
as que por ejemplo, en la Universidad Iberoamericana (UIA) Puebla los rasgos de un buen
profesional se orientan mayoritariamente hacia lo que en la definicin del proyecto se
llama: competencias ticas y se ubican en el ltimo lugar las competencias sociales. Esto
podra ratificar los resultados de la investigacin con egresados de la UIA Ciudad de
Mxico, que coordin Muoz Izquierdo hace unos aos (Muoz, Rubio, Palomar y
Mrquez, 2001), en la que se muestra que los estudiantes reciben un fuerte impacto en su
formacin profesional, respecto a los valores humanos personales, pero no tienen suficiente
desarrollo en cuanto a la valoracin de aspectos relacionados con el compromiso social y la
justicia, que son eje fundamental en el ideario de dicha universidad.
Es importante explicitar que esta investigacin como la mayora de las encontradas en las
memorias de congresos y libros publicados en este campo est situada en el anlisis de los
valores que declaran los estudiantes y profesores de posgrado y no aporta resultados en
cuanto a la tica realmente vivida por ellos. El trabajo de investigacin basado en este
concepto de valores profesionales es, de cualquier modo relevante, porque como se
mencion, existe una relacin dialgica indisoluble entre la praxis, el discurso y el anlisis
reflexivo en el terreno de la tica profesional, que puede ser entendida tambin como el:
Desde esta definicin de tica profesional se puede ver cmo, la tradicin prxica y
discursiva de un gremio profesional genera una tradicin valorativa, a partir del ejercicio
concreto de la profesin y de la manera en que se va construyendo la interpretacin
aceptada en cada gremio profesional sobre las conductas que son vlidas o correctas desde
una perspectiva moral.
Sin embargo, resulta muy relevante para los fines de este trabajo, destacar que esta
tradicin valorativa que sirve de referente discursivo a los distintos gremios profesionales
sobre los valores profesionales aceptados o deseables, no es necesariamente la que va a
determinar las decisiones concretas de los profesionales en su prctica cotidiana.
Cmo encontrar otros referentes que puedan orientar la investigacin sobre la tica
profesional desde una perspectiva compleja, y que permitan dar cuenta de los dilemas y las
contradicciones ticas que enfrenta todo profesional en la toma de decisiones concretas, en
casos especficos ms all de los cdigos deontolgicos o las tradiciones valorativas
establecidas en cada campo?
Edgar Morn (Pars, 1921) es considerado uno de los tericos de mayor relevancia en el
campo del llamado pensamiento complejo. Este enfoque tiene como punto de partida
fundamental la necesidad urgente de un cambio en la racionalidad cientfica y en la vida
cotidiana, para trascender la visin simplificadora que la cultura y que tiende a separar,
dispersar y desunir los elementos de las distintas realidades problemticas, para analizarlos;
pero al hacerlo los descontextualiza y los saca de su mbito de relaciones. Por ello produce
comprensiones distorsionadas de los fenmenos. La lgica disyuntiva que tiende a
simplificar los fenmenos, a verlos desde una sola perspectiva y disciplina y a excluir el
desorden, que es parte fundamental de la propuesta moriniana de complejidad: la realidad
natural y humana est siempre regida por la dinmica ordendesordeninteracciones
organizacin. Para comprenderla es necesaria una visin que articule todos los elementos
inseparables de un fenmeno. Como afirmaba Pascal (1976), tener como imposible
entender el todo sin comprender las partes y comprender las partes sin entender el todo de
los fenmenos de la realidad. Es necesaria pues, una lgica de conjuncin y no de
disyuncin, as como una racionalidad capaz de incluir y lidiar con el desorden y no
solamente con el orden en los fenmenos naturales, humanos y sociales, incluyendo por
supuesto el campo de la tica: "La tica se manifiesta para nosotros, de manera imperativa,
como exigencia moral" (Morn, 2005, p. 19).
De esta exigencia moral, que nace de las tres fuentes ya descritas, emergen todos los
valores y elementos constitutivos ms elaborados y complejos que se podran considerar
propiamente humanos, incluyendo por supuesto los valores profesionales. Todos estos
elementos constitutivos de la estructura moral humana estn arraigados en este imperativo
moral fundamental, que es el fruto de la organizacin biolgica bsica de los sujetos
humanos, es decir, que depende de la estructura fsicoqumica y orgnica que constituye a
los seres humanos en tanto organismos vivientes. De esta manera, como dice Morin (1981,
p.135): "La conciencia (moral), la libertad, la verdad, el amor, son frutos, flores...los fines
sublimes a los cuales nosotros nos abocamos, son las eflorescencias de sistemas de sistemas
de sistemas, de emergencias de emergencias de emergencias".
Por su carcter computante, toda organizacin viviente implica una toma de decisiones,
aunque sea a nivel elemental y no consciente, ni propiamente libre. Esta decisin se
presenta cuando se procesa informacin para organizar y mantener la vida y su interaccin
con el ecosistema; existe una alternativa o incertidumbre y, por tanto, existe posibilidad de
eleccin. En esas situaciones la computacin del organismo viviente se encuentra sujeta a
una necesidad de "toma de partido" por una opcin u otra, en la que "juega un papel lo
aleatorio pero no solamente es aleatoria, puesto que el mismo proceso computante reconoce
la incertidumbre y participa en esta eleccin" (Morn, 1997, p. 192).
Este carcter de distribuidor de valores, que define a todo sujeto viviente, es el que aporta la
base biolgica para pensar la tica humana. Si bien es claro que este acto de distribucin de
valores, en sus etapas ms elementales, no es todava un acto plenamente moral por no ser
un acto consciente.
La libertad real, la libertad humana que son limitadas, se ejercen, crece y se desarrolla o
decrece y se atrofia en el rejuego dialgico entre egosmo y altruismo que es propio del
sujeto viviente y tambin, de una manera consciente y ms compleja, del sujeto humano.
Para Morn todo acto moral es un acto de religacin: con otro al que se reconoce como
semejante, con una comunidad cercana, con una sociedad y con la especie humana como tal
(Morn, 2005, p. 21). Se podra decir que esta religacin con lo exterior nace por este
rejuego entre altruismo y egosmo de una religacin inicial profunda del sujeto con su
propio ser.
La visin del acto moral como acto de religacin es un fundamento central en la tica de
Morn (2005). Todo lo que contribuye a esta religacin es lo que sera ticamente deseable.
Lo bueno y todo lo que destruye esta religacin, todo lo que separa "diabolus" dice l, es
precisamente el que separa es lo indeseable, lo malo, lo que desva el curso de la
existencia de lo que sera una buena vida humana.
La religacin surge del principio de inclusin que funciona en todo sujeto. Por ella, el
individuo es capaz de abrirse al otro, de vivir la amistad y el amor, y de desarrollar el
altruismo, de inscribirse en un grupo y de construir comunidad. Para que este proceso
pueda desarrollarse es necesario que exista un equilibrio en tensin entre la autonoma
individual y la solidaridad, entre el sano funcionamiento del principio de exclusin y el de
inclusin.
Este proceso genera y es generado por un hper desenvolvimiento del individualismo que
"conduce al nihilismo que produce sufrimiento" (Morn, 2005, p. 28). Deja al sujeto
humano individual y a la sociedad entera totalmente en el vaco que provoca la falta de
sentido y la imposibilidad siquiera de intentar una bsqueda del mismo.
IV. tica profesional como religacin social: hacia una visin compleja
Entender la tica profesional fundamentalmente como religacin social tendra que llevar a
los investigadores y a los tericos del tema a mirar esta dimensin dentro del contexto
multidimensional de las exigencias de religacin que experimenta todo ser humano y son
base de la vida tica. Todo profesional vive tambin inmerso en una experiencia de
religacin individual principio egosta que lo hace velar por su propia supervivencia y
hacerlo mucho ms enfticamente en una poca de "competencia salvaje" derivada del
desarrollo de la globalizacin del mercado sin globalizacin de lo humano. Todo
profesional vive tambin la experiencia del deber de religacin con los suyos, el deber
genocntrico que lo hace actuar a veces hacia el respeto a su propia tradicin y a sus
antepasados por encima del bienestar social. Todo profesional tiene adems un compromiso
como miembro de la especie humana, un deber antropocntrico que debera orientarlo hacia
acciones y decisiones que privilegien la necesidad de salvar a la humanidad, realizndola
incluso por encima de lo que conviene a la sociedad a la que pertenece o de lo que prescriba
la tradicin valorativa de su gremio.
Pero adems, es necesario considerar que "el problema tico surge cuando dos deberes
antagnicos se imponen" (Morn, 2005, p. 47). El profesional en el actual cambio de poca
est siempre cruzado por contradicciones que se vuelven autnticos dilemas morales, si
toma en serio su compromiso social desde la profesin.
Cules son las contradicciones que enfrentan los profesionales en un sistema que
considera la esttica, la comodidad, el confort y la ganancia econmica por encima de
valores fundamentales en el discurso tico de las distintas tradiciones profesionales? Esta
pregunta puede ser investigada si se asume la perspectiva tica compleja de Morn ms all
de la visin de los "valores profesionales" que es la dominante en el campo de la tica
profesional hoy en da.