Julie Cannon 2008 Ven A Buscarme PDF
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Julie Cannon 2008 Ven A Buscarme PDF
by
Julie Cannon
Reconocimientos
Dedicatoria
Julie Cannon
Captulo Uno
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Captulo Dos
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Foster.
Disclpame, dijo, y se qued pasmada con los ojos azules
ms vividos que haba visto nunca. Tenan el color de una baha
del Caribe y eran claros, ntidos, y curiosos. El rostro ligeramente
inclinado hacia el suyo era suave e impecable, perfectamente
proporcionado, y sugera un toque de maquillaje. Ella era
absolutamente preciosa. Puedo hablar contigo un momento?
Cuando no hubo respuesta inmediata, Elliott agreg, Por
favor.?
Lauren sinti una oleada de ternura hacerse curso a travs de su
cuerpo con la simple palabra, sumndose al arrebato que haba
provocado la directa mirada de la mujer. Haba estado tratando de
llevar su parte de la conversacin con un pequeo grupo de abogados
que haban gravitado juntos, pero se haba distrado al ver la alta
figura acercndose. Murmurando una excusa corts, se alej del
grupo.
Siento alejarte de tu cita, pero yo...
Lauren la interrumpi antes de que la mujer pudiera continuar.
l no es mi cita. Tan pronto como lo dijo se pregunt por qu
estaba explicndose con esta extraa - esta extremadamente grosera
extraa.
Elliott asinti con la cabeza y slo pas un momento
preguntndose por qu se senta aliviada con la informacin. Mi
error, entonces. Yo quisiera pedir disculpas por mi terrible conducta de
antes. Estaba en medio de algo y me sorprendiste. Me la tom contigo,
que no tenas absolutamente nada que ver con eso. Por favor, acepta
mis disculpas. Comenz a retorcerse cuando la mujer no respondi
como ella lo esperaba.
Y si no lo hago?
Oh, por el bien de Cristo Elliott no estaba de humor para que
jugaran con ella. Es una simple disculpa, no un tratado de paz
global. Su encantadora compaa reaccion como si le hubieran dado
una bofetada. Mierda, Ni siquiera puedo hacer sto bien esta noche.
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pero nunca solitaria. Sin embargo, de pronto, aqu con esta mujer,
era muy consciente de su estado solitario. Lauren supuso que no
era irracional imaginar ser tocada y sostenida, a pesar de que era
inusual que tuviera esos pensamientos por una mujer. Para ser
honesta, de hecho rara vez los tena por nadie.
Elliott sostuvo las puertas francesas abiertas, esperando a que
Lauren pasara por ellas. Mientras lo haca, cogi una bocanada del
perfume de Elliott y lo reconoci como Carisma, la nueva fragancia
que a todos en su oficina les encantaba. Eso es apropiado. Cuando
salieron al patio, el nivel de ruido disminuy sustancialmente y se
reunieron con la fragancia del jazmn llevado por una brisa fresca.
Qu te trae a este evento de gala, seora Collier? Pregunt
Elliott mientras apoyaba la cadera en la barandilla que separaba los
jardines de la zona donde se encontraban.
Una obligacin de negocios. Lauren no saba por qu senta
importante reiterar que no estaba con el Sr. Suave por propia
eleccin. Y a ti?
Un buen amigo mo esta con la agencia de relaciones pblicas
que promova esta fiesta. Victoria no tena una cita, por lo que me
pidi que fuera su acompaante.
Lauren se sorprendi con la sensacin de hormigueo en la boca
de su estmago por el uso de Elliott del trmino cita. Lo dijo
inocentemente, pero Lauren saba exactamente a lo que se refera.
Elliott capt la reaccin de Lauren y sonri. Victoria es
slo una amiga. Tom un sorbo de su bebida. Intentamos el romance
en la universidad pero ambas coincidimos en que somos mejores
como amigas que como amantes.
Ah esta, A la intemperie, abiertamente. Vas a tomarlo y correr
o slo a correr? Y por qu me importa? Elliott saba por qu le
importaba. Lauren era hermosa y encantadora, caractersticas que
normalmente no iban de la mano en las mujeres con las que sala.
Estaban definitivamente en la categora de hermosas y muchas haban
encantado su camino hacia su cama, pero en comparacin con slo los
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pocos minutos que haba pasado con Lauren Collier, algo les faltaba.
Elliott pens en eso y decidi que el atributo que les faltaba era la
clase. Y mira donde mi gusto habitual por las mujeres me ha llevado
hasta ahora. Frunci el ceo ante su fugaz pensamiento en Rebecca.
Lauren vio una gama de emociones reflejarse a travs de la cara
de Elliott, la ltima de las cuales era cinismo. La expresin le record
a Lauren que debera hacer lo polticamente correcto y regresar a su
cita. A la mierda. Por alguna razn no poda hacerlo, mejor pasar el
resto de la velada hablando con Elliott. El hecho de que Elliott
acababa de admitir que era lesbiana no fren su inters ni un poco. En
todo caso, Lauren lo encontr refrescante; al menos una persona en
esta habitacin no estaba siendo falsa.
Haciendo caso omiso del llamado del deber, dijo, Me gusta tu
nombre. Parece a tu medida. Dios mo, por qu digo esto? Apenas
si conozco a esta mujer. A ella no podra importarle menos si te gusta
su nombre o no.
Elliott no pareci dejarse intimidar por su comentario soso. Con
una nota de exasperacin fingida, dijo, Gracias. Era mi turno de
continuar la tradicin familiar. A medida que he ido hacindome
mayor he llegado a apreciarlo, pero hubo momentos, cuando estaba
creciendo, en que fue un dolor en el culo.
Lauren sonri. No te hubiera tomado por tradicionalista. Otra
suposicin apresurada. Se pregunt qu la haba posedo para que
hiciera tales comentarios personales. No era su estilo habitual.
Sinti el calor de lo ojos de Elliott quemar un sendero a travs de
su cuerpo. An envuelta en el vestido de seda negro que le caa en
suaves pliegues justo por encima de sus rodillas, se senta demasiado
expuesta. Cuando la mirada de Elliott se detuvo demasiado tiempo en
el modesto escote que mostraba una insinuacin de divisin, Lauren
sinti que sus pezones se endurecan y supo que eran visibles a travs
de la seda pura del corpio. Tena los hombros al descubierto, excepto
por las correas finas del vestido, y se sinti muy clida mientras lo
ojos de Elliott se movan por encima de ellos. Se qued sin aliento en
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vez que la he visto est con una mujer diferente, y todas son
impresionantes. Es un buen partido, pero parece que no tiene planes
de atarse.
En serio? Lauren volvi su mirada por la habitacin a tiempo
para ver a Elliott estrechando la mano de un hombre y caminar hacia
la salida. Elliott se dio la vuelta y mir como si quisiera volver a
donde Lauren estaba, pero cambi de idea cuando vio que hablaba con
Alan. En cambio, le hizo un pequeo gesto de adis con su mano
antes de salir por la puerta.
Debe ser duro preguntarte si una mujer est interesada en ti
o en tu dinero, dijo Alan con simpata.
S, supongo que debe serlo. Lauren definitivamente no estaba
interesada en el dinero de Elliott. Haba heredado una cantidad
sustancial cuando muri su abuela quince aos antes, y la haba
invertido sabiamente en los ltimos aos. Estaba en camino de una
cmoda jubilacin para cuando tuviera cincuenta si as lo deseaba.
Mmm. Escuchando la charla las chicas, ella es una mujer hbil
y nadie se va a casa decepcionada, si sabes lo que quiero decir. Alan
arque las cejas, en reminiscencia de Groucho Marx.
No dudo de eso. Lauren mantuvo pareja su expresin, para que
Alan no pudiera leer nada personal en sus preguntas.
Eso es lo que se dice en la calle sobre la Sra. Foster. Tmalo
como lo oyes, dijo con racionalidad.
Despus de algo de conversacin general se despidieron y,
mientras Alan se alejaba, Lauren continu reflexionando sobre lo que
haba aprendido. La generosidad de Elliott con los nios de San Diego
sealaba que haba mucho ms en su carcter de lo que nadie podra
adivinar. A primer rubor, Lauren haba pensado que era,
probablemente, demasiado narcisista como para que le importara un
comino de los dems.
Con una punzada de pesar, mir hacia la puerta por la que Elliott
haba salido. Saba que poda haber extendido su conversacin si lo
hubiera elegido, y ahora deseaba haberlo hecho. Preguntndose si
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alguna vez se encontrara con Elliott Foster otra vez, Lauren fue en
busca de su cita. Estaba dispuesta a poner fin a la farsa de la noche.
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Captulo Tres
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no que yo sepa. Por Dios, espero que no. Dijo lo que quera?
Elliott estaba sorprendida por su reaccin ante la mencin de la
mujer hermosa del sbado por la noche. Normalmente no reciba
llamadas telefnicas personales su oficina, y estaba segura de que no
le haba dado su nmero a Lauren. Un extrao hormigueo se escurri
por sus venas al saber que Lauren se haba tomado la molestia de
rastrearla.
Teresa coloc la nota rosa Mientras no estabas sobre la agenda
negra que en el escritorio de Elliott. Pidi que la llamaras. Ella tiene
una reunin hasta las once, pero estar libre despus de eso.
Elliott alcanz el mensaje. Qu estaba haciendo aqu el chico
de mantenimiento? Es el aire acondicionado de nuevo?
Teresa hizo una pausa en su salida. Yo no llam a nadie. Dijo
que era mantenimiento de rutina.
Elliott mir hacia las rejillas de ventilacin. Por lo menos este
hombre haba dejado todo en orden, no como el de la ltima vez. Se
qued mirando la pared de enfrente, extraamente desmotivada para
trabajar. Tena dos horas que matar antes de que pudiera llamar a
Lauren, el tiempo suficiente para reunirse con un par de altos
miembros del personal y asegurarse de que la presentacin de su
reunin con el cliente al da siguiente estaba lista. Sin embargo,
estaba distrada sin remedio. Molesta con ella misma, se imagin a su
abuelo sentado aqu, detrs de esta misma mesa de madera de cerezo.
Qu pensara de ella ahora?
No necesit mucha imaginacin para escuchar al patriarca
dicindole que ya era hora de que creciera y asumiera la
responsabilidad que era su derecho de nacimiento. No haba conocido
muy bien al anciano, pero pareca cobrar vida cuando entraba en la
oficina y Elliott saba que ella haba heredado ese gen. Le encantaba lo
que haca, era buena en eso y no poda esperar a ir a trabajar casi todas
las maanas. Pero hoy lo nico que quera era que las agujas en el
reloj Waterford se movieran. Con un suspiro melanclico, dirigi su
atencin a una pila de papeles, y se oblig a concentrarse en los
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negocios.
*
Del otro lado de la ciudad, en el piso 42 del edificio de Bradley
& Taylor, Lauren tambin estaba sentada en su oficina, pero no estaba
sola. Estaba luchando por mantener su mente en lo que se estaba
discutiendo con las tres personas sentadas alrededor de la mesa de
conferencias. Lauren siempre se enfocaba cuando estaba trabajando,
pero su mente segua derivando a la impresionante mujer de esmoquin
que haba conocido dos noches atrs. Algo sobre Elliott Foster haba
colonizado sus pensamientos y no estaba durmiendo bien a causa de
ella. Pero lo que le preocupaba a Lauren, an ms que el cansancio y
la prdida de concentracin, era su comportamiento inusual de esta
maana, cuando recogi el telfono y llam a Elliott.
Lauren nunca haca nada sin pensarlo hasta el cansancio, y por
cierto, nunca perda el tiempo con alguien tan voluble como Elliott.
Lauren haba visto su ciclo a travs de la ira, la grosera, la frustracin,
la humildad y el encanto siempre presente e, inexplicablemente, haba
encontrado a cada una ms apasionante que su precursora. El da
anterior haba pasado horas en Internet buscando informacin acerca
de la intrigante mujer. Afortunadamente para Lauren, haba abundante
material, y algunos artculos incluso se referan abiertamente a Elliott
como lesbiana. Otros se hacan eco de lo que le haba arrancado a
Alan y proporcionan unos cuantos chismes jugosos adicionales.
Cuanto ms lea sobre Elliott, ms quera saber, hasta que
finalmente arrastr sus ojos legaosos a la cama bien pasada la
medianoche. Se qued totalmente atnita cuando se encontr
hablando con la asistente de Elliott a primera hora de esta maana.
No era suficiente haber investigado a la CEO de Foster McKenzie,
como si de ello pudiera salir una demanda legal?
Lo siento, qu dijo usted? Lauren se sinti avergonzada de
haber perdido el rastro de la conversacin. Enfcate Lauren. Desterr
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con racionalidad.
Merison dirigi una mirada suplicante hacia el consejero
delegado, quien finalmente habl. Ahora, Lauren, seguramente hay
algo que podemos hacer aqu
Ella no se perdi la inflexin en su pregunta, ni la expectativa
que l tena en que ella apoyara la posicin de Merison. Lauren saba
que su siguiente comentario sera un punto que definira su carrera en
Bradley & Taylor.
No, Charles, no hay nada que podamos hacer. No podemos
despedirlo por el simple hecho de ser gay. No voy a apoyar una
posicin que no es tica, por no hablar de moralmente equivocada.
Ella observ cmo los dos hombres tensaron sus ojos ante su ltimo
comentario como si la vieran por vez, y ella supo que acababa de
entrar en un campo minado.
Lauren -
Es obvio que no es la respuesta que estn buscando, pero no
obstante, es mi decisin. En su opinin, no haba nada ms que decir
al respecto.
Los dos hombres se levantaron de su mesa. Merison habl con
los labios ajustados. Muy bien, acepto eso por ahora, pero puedo
garantizar que el Sr. Nelly-Hada ser un problema. Puedes tomar nota
de mis palabras sobre eso.
Antes de que l se apartara de la mesa, Lauren se levant y clav
sus ojos en l. Thomas, mi consejo hacia ti como consejero en jefe
es que dejes de utilizar trminos inadecuados y dejes de hacer
comentarios despectivos acerca de un empleado de esta empresa.
Lauren se derrumb en el pequeo sof pequeo en su oficina.
Santo Cristo. Creo que estoy de mierda hasta el cuello ahora mismo.
No haba nadie en la sala a su confirmar su observacin.
*
Elliott podra jurar que las manecillas del reloj de cristal no se
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cafetera en el vestbulo.
Lauren poda or la sonrisa en la voz de Elliott. Personalmente,
soy adicta a los Peanut Butter Cup de Reese admiti con
culpabilidad.
Ah, tu ves, no importa cun adultas seamos o el xito que
tengamos, todas tenemos nuestros vicios ocultos. Elliott se ech a
rer.
No dir nada si tu tampoco lo haces, dijo Lauren como si el
secreto fuera un asunto de seguridad nacional.
Es un trato. Elliott realmente no saba qu decir a
continuacin.
Lauren contuvo una risita nerviosa. Se senta absolutamente
ridcula, atemorizada, y tan excitada como no lo haba estado en aos.
Yo quera hacerte saber que acepto tus disculpas. La pausa en el otro
lado la puso nerviosa.
Por ltimo, la voz suave respondi, y Lauren relaj su mano que
apretaba el receptor. Gracias. Estaba un poco preocupada. Tena
miedo de que iba a tener que decirle a mi hermana que me haba
comportado de ese modo y ella me hara vivir el santo infierno
durante semanas hasta que hiciramos las paces. Y confa en m, no
sera un bonito espectculo.
Me alegro de haberte salvado de su ira. Tiene muchas
oportunidades de fastidiarte as? Esta nueva percepcin de la vida de
Elliott era fascinante para Lauren.
Elliott ech un vistazo a la foto de Stephanie que estaba ubicada
en un lugar destacado en la esquina de su escritorio. Ms de lo que
que me gustara, pero no tanto como sola hacerlo. Me he asentado un
poco en los ltimos aos, y ahora centra su atencin en hacer parejas
entre sus amigos. No creo que ellos estn completamente
emocionados al respecto. El ritmo cardaco de Elliott aument
cuando oy rer a Lauren. Qu maravilloso sonido.
Slo puedo desearlo. Soy hija nica. Lauren hizo una mueca,
recordando que haba pasado varias semanas desde que haba llamado
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a su madre.
Caramba, y yo pensaba que lo tena difcil. Ambas mujeres
rieron.
Actuando en un impulso, Lauren pregunt Vas a cenar
conmigo el sbado por la noche? Jess, no puedo creer que eso
acaba de salir de mi boca. Contuvo el aliento.
Elliott no esperaba la invitacin, y sospechaba que Lauren no
haba planeado hacerla. Estaba acostumbrada a que las mujeres
e incluso algunos hombres despistados hicieran el primer movimiento
para seducirla, pero esta vez no estaba segura de que la invitacin
fuera una insinuacin.
Sin saber lo que se haba metido en ella, Lauren estaba
completamente avergonzada y trat desesperadamente de pensar en
una manera de salir de esto. Nunca haba estado tan poco preparada
para lo que haba salido de su boca. Um... Yo...
Elliott se apresur a decir, Me encantara.
Y ahora qu demonios digo. Piensa! Piensa! Lauren estaba
aturdida por su reaccin a esta mujer, y sacudi su cabeza en un
intento de apresurar su cerebro a la accin. Su mente estaba
completamente en blanco mientras luchaba por llegar al nombre de
cualquier restaurante de la ciudad. Su salvacin lleg en la forma de
una invitacin a una reunin-almuerzo ubicada un lugar destacado en
su bandeja de entrada.
Has estado en el nuevo restaurante en el Borgotta llamado
Madison? Se refiri a la tiendas de lujo recin remodeladas en el
paseo martimo.
No, no he estado. He odo que es maravilloso. Elliott se
recost en su silla y puso sus pies sobre su escritorio.
Una imagen vvida de Elliott sentada frente a ella en un pequea
mesa ntima invadi los pensamientos de Lauren. Vio la luz de las
velas centelleando en los ojos oscuros que mantenan el misterio y la
aventura. Largos dedos sosteniendo una copa de Dom Perignon que se
mova lentamente hacia los labios que Lauren realmente pudo sentir
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Captulo Cuatro
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*
Jess, Lauren, slo elige algo. Lauren estaba en su armario
examinando las ropas que quedaban cuidadosamente colgadas en la
barra. Observ la pila de prendas que ya se haba probado y desechado
en su lecho por no ser las correctas. Estaba nerviosa y quera verse
lo mejor posible. No saba muy bien cmo clasificar esta noche con
Elliott. No era realmente una cita, pero an as, ciertamente se senta
como tal.
Las mariposas empujando por espacio en su estmago eran una
clara indicacin de que ella estaba esperando esta cena con ms
anticipacin de la que alguna vez haba experimentado con otros
acompaantes. Cogi una percha y finalmente se reconoci a s misma
que encontraba a Elliott ms que slo atractiva y no estaba lo bastante
segura de qu hacer con ese hecho. Lauren era altamente educada,
haba viajado mucho, y estaba lejos de ser ingenua en las cosas
mundanas, pero estaba muy lejos de su liga con esto.
Frunciendo el ceo ante las perchas vacas, no pudo recordar la
ltima vez que haba estado as de nerviosa. Viajaba en las altas
esferas y, gracias a su educacin, no se dejaba impresionar por la
pompa y circunstancia, o por la gente. A su padre le gustaba su trabajo
como cartero y le haba enseado la importancia del compromiso con
la familia, el trabajo, y el pas. Su madre era maestra y, durante toda
su infancia, Lauren haba estado expuesta a la literatura y a diferentes
culturas. Todava conservaba el amor por el aprendizaje y la
aceptacin de las diferencias con las que haba crecido.
El dinero era escaso en la casa Collier, y Lauren haba trabajado
duro para ganar lo suficiente para asistir a la universidad local, donde
se gradu summa cum laude y se le concedi la entrada a la Facultad
de Derecho de la Universidad de Harvard. En Harvard, Lauren
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encontr, casi por primera vez en su vida, gente que crea que su lnea
de sangre o su saldo en el banco los haca superiores a los dems. Por
necesidad, haba aprendido a adaptarse a su entorno, y se enorgulleca
del hecho de que nunca comprometa sus valores o su integridad al
hacerlo. Harvard, la haba preparado bien para lo que vendra en su
la vida laboral.
En esos das, se vio rodeada por hombres y mujeres de xito
y tambin por aquellos que recurren a cualquier cosa para ser un
miembro del club. Lauren era consciente de que tena enemigos,
compaeros de trabajo que resentan su alto cargo. Por lo general
subestimaban su fuerza y su inteligencia, y si Lauren alguna vez tuvo
que actuar para proteger sus intereses, sus objetivos nunca supieron
qu los haba golpeado hasta que todo haba terminado. A travs de
trabajo duro y dedicacin, se haba ganado la reputacin de ser
brillante en la ley y muy astuta polticamente. La mayora de la gente
saba que era mejor no hacer un enemigo de ella, incluso aquellos
cuyos avances ella rechaz.
A lo largo de su carrera se haba encontrado con hombres
acostumbrados a salirse con la suya, que pensaban que le estaban
haciendo algn tipo de favor al ligar con ella. Al igual que muchas
mujeres exitosas con las que haba hablado sobre este tema, pareca
atraer a los hombres que estaban interesados ya sea en ser dominados
o en conquistarla. Tena citas cuando encontraba el tiempo y haba
logrado mantener dos relaciones semi serias por varios aos. Pero
cuando cada hombre le propuso matrimonio, se encontr
sorprendentemente ambivalente. Cuatro aos haban pasado desde que
rompi con su ltimo futuro marido, y haba salido a medias con un
puado de hombres en ese tiempo, pero ninguno signific nada. Haba
empezado a preguntarse si alguna vez conocera a alguien que pudiera
inflamar su alma.
En los ltimos aos, las mujeres haban expresado en ocasiones
su inters en ella tambin -- no era como si ella no conociera ninguna
lesbiana pero nunca haba salido con una mujer en serio. Lauren
Julie Cannon
Julie Cannon
*
A doce kilmetros de distancia, en su casa en McComb Drive,
Elliott estaba sentada en un mullido silln de cuero, bebiendo
lentamente Chivas de un vaso de cristal pesado. Su cuerpo estaba
inmvil, pero su mente corra en competencia directa. No poda
recordar esperar con tanta impaciencia una noche con una mujer como
lo haca esta noche. Lauren Collier era ciertamente atractiva y la
chispa del deseo instantneo, pero haba algo en ella que acrecentaba
la anticipacin de Elliott. Pareca muy diferente de las mujeres con las
que Elliott sala por lo general.
Elliott nunca haba tenido escasez de mujeres atractivas
dispuestas a compartir su cama. Crea que si dos mujeres se sentan
atradas la una por la otra y ambas queran lo mismo, entonces no
haba razn por la que no deban pasar la noche juntas - o en algunos
casos la tarde. Era slo sexo, algo que dos adultos consienten
disfrutar. Como resultado haba tenido muchas parejas sexuales, y la
mayora de sus relaciones duraban das o semanas, pocas veces ms.
Las relaciones casuales satisfacan sus necesidades sexuales y se
adaptaban a su estilo de vida, sobre todo porque estaba consumida en
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general?
S, como que eres lesbiana, verdad?. Elliott reprimi una
sonrisa y se sent en la silla. Sorprenderme.
Su mirada humeante hizo que el pulso de Lauren se acelerara.
Algo me dice que muy pocas cosas te sorprenden, Elliott. Son ms
segura de lo que se senta.
La forma en que Lauren dijo su nombre envi un rayo de
electricidad a travs del cuerpo de Elliott, haciendo que sus dedos
cosquillearan con el deseo de tocarla. T lo hiciste.
En serio? Cmo es eso? Lauren no poda creer que estaba
llevando adelante esta conversacin con lo que pareca ser compostura
cuando su estmago estaba atado en nudos.
Tiene agallas, Voy a concederle eso. Elliott tom otro sorbo de
su bebida y casualmente se cruz de piernas, dndose un momento
para juzgar a donde deba ir desde aqu. Decidi que con precaucin
era el mejor enfoque. Cuando me invitaste a cenar.
Lauren respondi sin pensar. S, bueno, un poco me sorprendi
a mi tambin.
Elliott imit la pregunta de haca un momento. En serio?
Cmo es eso? Se senta como si estuviera en el borde de su asiento
esperando la respuesta.
No estoy muy segura. Por un lado pareca algo perfectamente
comn que hacer para conocer a alguien mejor... Lauren vacil, sin
saber muy bien cmo terminar la sentencia.
Pero por otro lado, Elliott le solicit, con las manos como
apoyo. Contuvo la respiracin, temerosa de que su reputacin la
hubiera precedido negativamente. No sera la primera vez que una
mujer se sintiera incmoda de ser vista con ella. Su imagen de vez en
cuando apareca en la seccin sociedad del diario, junto con
su actual amiga, como les gusta etiquetar a sus citas. Si tena
suerte, ese era el nico lugar en que apareca la foto. Pero a los
tabloides locales de mala calidad les encantaba sacar provecho cuando
les era posible, y a veces eso molestaba a sus citas, que valoraban su
Julie Cannon
privacidad.
Por otro lado, normalmente no invito a alguien a salir tan
rpidamente despus de haberlo conocido. Supongo que me
sorprendi que en realidad lo hice.
A riesgo de hacer otra pregunta torpe, por qu estamos
saliendo a cenar esta noche?
El repique del reloj detuvo la respuesta de Lauren. Mir el reloj.
Oh, He perdido la nocin del tiempo. Tenemos que ponernos en
marcha.
Elliott se levant de su silla con los ojos brillantes. Me gustara
pensar que el tiempo vuela cuando te estas divirtiendo. Cerr con
llave la puerta de entrada detrs de ella y sigui a Lauren por el
camino iluminado hacia su coche. Oy el canto familiar de la alarma
del coche y las luces del techo emitieron un resplandor clido y
acogedor invitando a entrar al interior del vehculo. Bonito coche,
dijo Elliott apreciando el Mercedes convertible ltimo modelo.
Bueno, tal vez ella tiene una vena salvaje en ella despus de todo.
Gracias. Admito que es un poco demasiado, pero es divertido.
Elliott abri la puerta del pasajero y se desliz en el interior.
Colocndose su cinturn de seguridad observ a Lauren caminar
alrededor de la parte delantera de su coche. Hasta ahora la noche haba
comenzado tal como ella haba esperado. Lauren era encantadora,
ingeniosa e inteligente. Elliott estaba impresionada por la forma en
que ella haba respondido a sus preguntas, directamente, sin la timidez
a la que las otras mujeres con las que sala eran tan aficionadas. Su
honestidad era refrescante, pero Elliott se record a s misma que
tambin haba pensado lo mismo de Rebecca. Podra haber estado
ms equivocada?
Dej descansar su mirada en la suave lnea de los muslos de
Lauren debajo de la tela de color verde oscuro de sus pantalones. La
idea de deslizar una mano en el pequeo espacio entre ellos hizo que
los pensamientos desagradables sobre Rebecca se desvanecieran como
un mal sueo. Lauren le sonri y gir la llave en la ignicin. Elliott le
Julie Cannon
*
El camino al restaurante llev quince minutos, y mientras el
empleado del servicio de estacionamiento aparcaba el coche,
instintivamente puso la mano en la parte baja de la espalda de Elliott y
la acompa al interior. El matre las llev a una mesa junto a la
ventana donde el sol se pona sobre el Puerto de San Diego.
Este lugar es fabuloso, dijo Elliott una vez que se sentaron
y el sumiller tom su orden. Examin sus alrededores, teniendo en
cuenta que cada mesa estaba ocupada, muchas por gays y lesbianas.
Estoy sorprendida de que fueras capaz de conseguir una reserva.
Obviamente es muy popular.
Podra darte una respuesta ingeniosa y decir que simplemente
mencion mi nombre y milagrosamente estuvo disponible una mesa,
pero en realidad acababan de recibir una cancelacin cuando llam.
Elliott estaba empezando a disfrutar del sentido del humor de
Lauren. Me gusta ms la respuesta ingeniosa que la real.
Quedmonos con esa.
Est bien, pero no esperes que mi nombre detenga el trnsito.
Lauren escane el men, y su boca comenz a hacerse agua con las
deliciosas selecciones.
Tu en ese vestido que llevabas la noche del sbado sin duda
hubieses detenido el trnsito, dijo Elliott.
El corazn de Lauren dio un vuelco con el inesperado cumplido.
Poco a poco levant la mirada del men y la estableci en los agudos
ojos del otro lado de los suyos. Eso fue halagador. Gracias. Me gusta
vestirme arreglada de vez en cuando.
Y siempre te ves tan hermosa?
Ella no pierde el tiempo. Esta no era la primera vez que una
Julie Cannon
mujer ligaba con ella, pero sin duda era la primera vez que lo senta
recproco. Con el objetivo de aligerar el ambiente, dijo, Tu
realmente no esperas que yo responda a eso, verdad? Estara
mintiendo si dijera que no y sera narcisista si dijera que s.
Bueno, entonces contestar por ti. S, estoy segura de que te
veras preciosa en cualquier cosa. inmediatamente Elliott se imagin
como se vera Lauren en nada de nada, y sus manos comenzaron a
sudar.
Ahora me estas haciendo sentir avergonzada.
Lo siento, pero slo la verdad fluye de mis labios.
El corazn de Lauren se detuvo cuando se imagin esos labios
haciendo otras cosas tambin. Ella no estaba acostumbrada a tener
fantasas sexuales, sin embargo, no pareca en absoluto extrao que su
mente siguiera extraviada en ese camino desconocido.
Elliott noto la mirada de Lauren desviarse a sus labios y ley
algo ms que una mirada fugaz en sus brillantes ojos azules. Sonri
con la constatacin de que sus frescas lneas no seran desperdiciadas.
Este era un terreno familiar, terreno que ella haba transitado muchas,
muchas veces, y se relaj. Esta vista es fantstica.
S, lo es, no? respondi Lauren despus de que sus bebidas
fueron entregadas. Me encanta ver la puesta de sol sobre el agua.
Cuando yo era pequea mi pap me llevaba a la playa por la noche, y
nos sentbamos juntos y escuchbamos el sonido cuando el sol tocaba
el agua.
Cmo suena? le pregunt Elliott, atrada por el aspecto
nostlgico de la cara de Lauren.
Como un largo y lento chisporroteo que se hace ms y ms
fuerte cuando llega al agua y luego va disminuyendo, hasta que
desaparece en el horizonte. Como mujer adulta, s que el sol no toca
el agua, pero como nia pequea, te juro que lo poda or.
Dnde est tu padre ahora? le pregunt Elliott, con la
esperanza de que Lauren no dira que estaba muerto. Eso era. por lo
general. algo que mataba la conversacin.
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tengo un don para ello. En broma, dijo, Tengo que admitir que hay
momentos en que deseara estar todava dando vueltas sin
responsabilidades y... bueno, ya sabes. Mir en los ojos de Lauren
para medir su reaccin. Pero en general, lo estoy haciendo bien. Y
tu?
Si me gusta mi trabajo o si prefiero correr y.. bueno, ya sabes?
Lauren saba exactamente a lo que se refera a Elliott y la llam a ello.
Elliott levant las cejas y lade la cabeza en acuse de recibo.
Ambos.
S, me gusta lo que hago y soy buena en eso, respondi
Lauren. No he tenido muchas de oportunidades en el departamento
correr por ah, por lo que tendr que tomar tu palabra sobre lo mucho
que lo extraara. Esperaba que Elliott no se ofendiera con su ltima
declaracin.
Y qu con, bueno... ya sabes? Elliott estaba confiada en que
la conversacin iba en la direccin que ella quera.
Qu pasa con ello? Lauren contuvo la respiracin sin estar
segura de que quera para ir por ese camino. Me ests preguntando
si soy virgen? Se sorprendi de su propia pregunta y del tono
picarezco en el que la pregunt.
Tu eres una mujer hermosa, Lauren. Esa simple frase fue su
respuesta.
Gracias respondi Lauren en voz baja. Su voz tena una
ronquera que no haba estado all hace un momento. Sostuvo los ojos
oscuros a travs de la mesa. La promesa de pasin que vio all le sec
la garganta. Cmo esta conversacin de transform de burla en
ardiente deseo? Esta mujer es peligrosa, y yo no tengo ni idea de que
lo que estoy haciendo o incluso de por qu lo estoy haciendo. Lauren
alcanz la cuenta, agradecida de que sus manos nerviosas tuvieran
algo que hacer.
Gracias por la cena, Lauren, fue maravillosa, dijo Elliott
cuando finalmente se levantaron para marcharse.
Estuvo deliciosa, no es as?
Julie Cannon
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Captulo Cinco
Julie Cannon
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*
Elliott odiaba estar en espera, pero haba estado jugando al
telfono descompuesto con Ryan durante toda la maana. Mientras
escuchaba la estpida msica, su mente vagaba a Lauren por lo menos
por duodcima vez ese da. Haba pasado la mayor parte del domingo
tratando de determinar si ella haba ledo mal las seales que recogi
constantemente durante su cita. Su radar gay y la experiencia con las
mujeres rara vez le fallaban, y se sorprendi cuando Lauren dijo que
no. Tan sorprendida, de hecho, que ni siquiera trat de disuadirla. An
estaba desconcertada por el inesperado rechazo.
Sus amigos le haban dicho en varias ocasiones que su reputacin
un da la atrapara. El estmago de Elliott se revolvi cuando record
lo que haba dicho acerca de sus intereses en el pasado. Divertido
Elliott. Prcticamente le dijiste que eras una puta y t te sorprendes
de que ella te haya rechazado. Qu idiota! Saba que si la
retrospectiva fuera previsin habra adoptado un enfoque diferente.
Estaba tan acostumbrada a que cenar con una mujer hermosa fuese un
Julie Cannon
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citar a todos las personas con las que me he acostado y a todas con las
que pudiera estar pensando en dormir? Es eso? Esto estaba
empezando a sonar insano. Ella tena un montn de defectos humanos
normales, pero no incluan los descriptos en el documento.
Va a tratar. La respuesta de Ryan manifestaba su compromiso
de no dejar que esto sucediera.
Puede hacer eso? Elliott dijo una oracin en silencio.
No, esto es un truco estndar. Adems, si quiere citar a todos
aquellos con los que quieres tener relaciones sexuales, todos
moriramos de vejez antes de que llegara a la M
El sonido de la risa profunda de Ryan aliger el estado de nimo
de Elliott. No estoy segura de cual era tu intencin, pero lo tomar
como un cumplido.
No estoy seguro de que eso fue lo que quera decir. El estado
de nimo de Ryan rpidamente se puso serio. Esta cuestin podra ser
un problema si nosotros no llegamos a algn tipo de acuerdo con ella.
Tu sabes a quin va a llamar primero, y no tengo que decirte cmo se
sentir el senador Jarvis de que salga a la luz el nombre de su hija. No
quieres molestar a este tipo. l tiene un largo alcance en el sector
financiero.
Elliott finalmente se rompi. Te lo he dicho, yo no le voy a dar
nada. No medio milln de dlares, no cien mil dlares, no cien
dlares, no un maldito centavo! Te pago una suma escandalosa de
dinero, Ryan, y espero que termines esto. Ahora. Golpe el receptor
en la base y maldijo, El maldito hijo de puta!
Teresa asom tmidamente la cabeza por la puerta. Saba que su
jefa estaba hablando con su abogado y no estaban haciendo planes
para el fin de semana. Ests bien aqu? Cuando su cabeza no fue
arrancada de inmediato, entr en la espaciosa oficina y se detuvo
frente al escritorio desordenado.
Elliott dej caer su cabeza entre las manos. Jess F. Cristo. Me
estoy cayendo a pedazos. Rara vez perda los estribos, y cuando lo
haca nunca se lo tomaba con un espectador inocente. Se senta tan
Julie Cannon
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Julie Cannon
*
Al da siguiente, Lauren respondi su telfono cuando son
despus del almuerzo. Lauren Collier.
Hola, soy Elliott.
El corazn de Lauren salt al or la voz en el otro extremo de la
lnea.
Hola a ti . No puedo pensar en algo mejor que decir?
Espero no estar interrumpiendo.
Despus de declinar la invitacin para pasar la noche del sbado
con Elliott, Lauren haba dudado que iba a saber de ella nuevo. Se
qued atnita cuando lleg el ramo de flores, una horas antes.
Inmediatamente sospech que eran de Elliott, y el paraguas lo afianz
aun antes de que leyera la tarjeta.
S, interrumpes, y gracias a Dios! Se quit las gafas de lectura
Julie Cannon
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Captulo Seis
Julie Cannon
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cita ?
No te veas tan sorprendido. T mismo lo dijiste. Me gusta mirar
tanto como a ti. Slo que en este caso, consigo tocar tambin. Con la
ridcula sensacin de vencer a Mark en su propio juego, se alej.
Cuando se detuvo frente a Lauren, permiti que sus ojos
viajaran a lo largo de ella una vez ms. Los detalles finos que se haba
perdido desde su punto de observacin en el saln estaban ahora
claramente visibles. El pelo de Lauren brillaba y ola un poco a
jazmn. Sus ojos eran cristalinos y se arrugaban en los bordes cuando
sonrea. Su vestido negro moldeaba su cuerpo como un guante, con
una insinuacin de escisin expuesta.
Estas hermosa. Para los odos de Elliott, el simple cumplido
no transmita adecuadamente su respuesta. Sin embargo, era sincero, y
se encontr maravillndose por la diferencia entre sus sentimientos
ahora y sus habituales halagos automticos con sus citas.
Lauren nunca se haba sentido tan hermosa como lo hizo en el
momento en que vio a Elliott. La expresin en la cara de Elliott hizo
que su estmago se agitara y su corazn debi haber cado entre sus
piernas, porque el palpitar ah era casi insoportable. Igualando el
intenso escrutinio de su cita, dej que sus ojos vagaran desde los
zapatos impecablemente lustrados al ntido pliegue en los pantalones
negros brillantes y a la pajarita verde oscura complementando la
almidonada camisa de color crema. El cuello bronceado por debajo, de
pronto estaba pidiendo ser besado. Sacudida, su mente perdi todo
pensamiento cuando sus ojos recorrieron la distancia restante y se
encontraron con los de Elliott.
Gracias. Te ves estupenda tambin, respondi a travs del nudo
en su garganta.
La mirada ardiente en los ojos de Elliott era ms de lo Lauren
poda soportar. Por mucho que deseara a esta mujer, tena que detener
esto ahora o arriesgarse a ponerse en ridculo delante de todas
de estas personas. Se acerc y dijo en voz baja Tienes que parar
de mirarme de esa manera, Elliott.
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Julie Cannon
*
Elliott haba hecho reservas en el exclusivo restaurante Barretts,
a poca distancia del teatro. Al salir del auditorio, Lauren vio a un
hombre corriendo hacia ella, agitando su mano para obtener su
atencin.
Es mi vecino, explic, y se detuvieron para esperarlo.
Odio molestarte, dijo despus de que se hicieron las
presentaciones y l estrech la mano de Elliott. Pero me preguntaba
si podras llevarme a casa. Mi esposa fue llamada del hospital a mitad
de la funcin. Sabes como es esto.
Quedaste varado? Lauren podra haberlo besado en ambas
mejillas. Le entreg las llaves del coche y le dijo: Elliott me puede
llevar a casa. Estamos por ir a cenar. Se volvi ligeramente hacia
Elliott. Si te parece bien?
No haba duda en la mirada de Elliott. Ser un placer para mi.
Lauren le dio a su vecino una brillante sonrisa y se
intercambiaron breves bromas de despedida, y luego ella y Elliott
reanudaron su paseo.
Sus pasos eran tranquilos, como los sonidos de la ciudad que las
rodeaba. Las farolas arrojaban un brillo suave en la escasamente
poblada acera de ladrillo y argamasa. Los escaparates de las tiendas de
moda mostraban con orgullo las tendencias de la moda, brillantes
diamantes, y los ltimos libros con xitos de ventas. Los sonidos de la
msica flotaban en el aire cuando los clientes salan de restaurantes y
bares a lo largo de la calle. Una bocina son ms abajo en la calle y
una sirena se lament a pocas cuadras ms. Los vendedores
ambulantes pregonaban de todo, desde rosas rojas a perfumes baratos.
Una suave brisa sopl mechones de pelo rojizo sobre la cara de
Lauren, y ella los sujet de nuevo en el broche en su nuca mientras
Julie Cannon
Julie Cannon
*
Las manos de Lauren se negaron a dejar de temblar en todo el
camino de regreso a su casa, y cuando Elliott se detuvo en el camino
de entrada supo que no quera que su noche terminara. Yo quisiera
usar mi vale. Alz los ojos de las manos fuertemente apretadas sobre
su regazo para detenerse en un par de ojos negros abrasadores.
Quieres entrar?
S, dijo Elliott suavemente.
Sin decir palabra Lauren abri la puerta principal, plenamente
consciente de la proximidad de la mujer que haba puesto su cuerpo en
llamas. Una vez en el interior, dej caer las llaves sobre el aparador y
se volvi hacia Elliott. El deseo ardiente de sus ojos hizo que las
rodillas de Lauren se debilitaran. Puedo ofrecerte algo?
Slo t. Elliott inclin la cabeza y la bes.
Los labios de Lauren eran ms suaves de lo que haba imaginado,
y sabore cada sensacin. Mordisque suavemente, sonriendo cuando
Lauren hundi sus dedos firmemente en su cabello y la atrajo hacia s.
Julie Cannon
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te ayude con eso. Cerr la brecha entre ellas, que hasta hace unos
momentos haba sido casi inexistente. Conforme trabajaba sobre los
botones, sus manos estaban tan inestable como sus piernas.
Lo siento mucho. Sentirlo mucho ni siquiera empezaba a
describir la pena de Lauren por la interrupcin. Ese era mi CEO.
La sonrisa de Elliott era suave, slo poda imaginar cmo una
llamada del jefe poda frenar de inmediato las intenciones amorosas.
Lauren hizo un gesto de frustracin. Soy abogada corporativa,
no criminal. Qu quiere que haga yo? Nunca me llaman a casa y
cuando lo hacen, tena que ser ahora!
Lauren, est bien, de verdad. Elliott cerr el ltimo botn del
vestido de Lauren. Puso su dedo bajo la barbilla de Lauren y la elev
de modo que sus ojos se encontraron. Mejor ahora que quince
minutos mas tarde, cuando no habras sido capaz de contestar el
telfono.
La nota de picarda en su voz ayud a Lauren relajarse. Suenas
muy segura de ti misma.
Elliott fue arrastrada al destello de los ojos brillantes que la
miraban, y contra su mejor juicio, se inclin y bes a Lauren de
nuevo. El beso fue tan dulce como el anterior y la respuesta de Lauren
fue instantnea, pero antes de que las cosas pudieran progresar, Elliott
alej sus labios una fraccin de pulgada. Slo voy a donde la dama
me lleva, dijo con voz ronca.
Lauren se ruboriz. Creo que el camino estaba muy claramente
marcado, no? Cmo puedo estar bromeando con esta mujer,
cuando todo lo que quiero es que me viole en este mismo momento?
A pesar de que el destino puede ser conocido, la diversin est
definitivamente en el viaje. Y yo estaba esperando con ansias
identificar tus hitos en el camino ... Bueno, eso fue cursi. Elliott se
sinti un poco tonta con su ltimo comentario.
Es eso una promesa?. pregunt Lauren con expectativa. No
haba pensado en otra cosa que en las manos Elliott sobre ella en toda
la noche, y la llamada de su empleador haba aplastado cualquier
Julie Cannon
Julie Cannon
Captulo Siete
Julie Cannon
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+Un aperitivo?
S, un aperitivo. Su voz se hizo suave y ronca. Tu me diste
una vista previa de lo que, espero, est por venir. Esa pequea muestra
hace que te desee ms ahora de lo que lo hice entonces.
Le tom un momento a Lauren comprender las palabras. No
tena mucha experiencia ligando a travs del telfono mientras estaba
en el trabajo, y era perturbador. Perturbador de una manera muy
positiva. Sorprendida de ser capaz de responder con calma a un
comentario tan provocativo, respondi: Es as?
S, Consejera, es as, dijo Elliott firmemente, sin dejar dudas
de sus intenciones.
Lauren sinti el arrebato del deseo comenzar en su intestino y
extenderse rpidamente por todo su cuerpo. Las mariposas volvieron a
su estmago y las imgenes que se agolpaban en su mente hicieron
que sus piernas se debilitaran. Bueno, Elliott, sin duda sabes cmo
hacer que una chica se sienta deseada.
No hay absolutamente ninguna duda en mi mente. Elliott lo
estaba disfrutando inmensamente y se pregunt cun lejos llevaran
este juego previo telefnico.
Lauren se sinti mareada por la voz suave y melodiosa del otro
lado de la lnea. Se sent en su silla, y la parpadeante luz roja en su
telfono la trajo de vuelta a la realidad. De alguna manera se
recompuso y respondi. Realmente no se qu ms decir a eso que no
sea gracias. La luz roja parpade ante ella casi en voz alta.
Por mucho que me gustara continuar con esta lnea de conversacin,
tengo que volver. Volver al infierno. Necesito una ducha de agua
fra!
Bueno, concedi Elliott, ms que un poco decepcionada. pero
Lauren estaba en medio de una reunin y Elliott respetaba eso.
Puedo llamarte esta noche? pregunt Lauren esperanzada.
Una oleada de calor atraves el cuerpo de Elliott y cay entre sus
piernas, traicionando lo mucho que deseaba a esta mujer, y cun
pronto. Tengo una reunin de directorio. Probablemente no llegar a
Julie Cannon
casa hasta muy tarde. Maldita sea. Ests libre para almorzar
maana?
No, tomar el vuelo de las 8:00 am a Chicago.
Cundo estars de vuelta? Elliott estudi el calendario en la
parte superior de su escritorio.
El jueves por la tarde.
Por qu parece eso a cien aos de distancia? Cenamos el
Jueves por la noche? Elliott hizo una nota mental para hacer que
Teresa cancelara su reunin con el presidente local de Rotary. l
quiere algo de m, y puede esperar.
Cenar sera genial. Te llamar cuando vuelva
El Jueves no podra llegar lo suficientemente rpido. Te hablar
entonces. Ten un viaje seguro.
Gracias. Lauren vacil. Elliott?
S.? Elliott poda decir por su tono de voz que haba otra cosa
que Lauren quera decir. Despus de varios segundos de silencio,
le demand, Lauren?
S, aqu estoy. Lo siento. Lauren se aclar la garganta como si
tuviera algo importante que comunicar, y luego pareci cortarse. Te
veo el jueves.
Decepcionada de que Lauren no terminase lo que iba a decir,
Elliott dijo: Lo espero con mucha ansiedad.
Yo tambin.
Lauren colg y respir hondo. Su bonita y ordenada vida haba
sido repentinamente puesta de cabeza por Elliott Foster. Saba lo
agotada que estara despus de tres das en Chicago, tena
declaraciones ininterrumpidas que duraran hasta altas horas de la
tarde, y aunque viajaba bastante, siempre tena dificultad para
dormir en hoteles. Sin embargo, la idea de estar con Elliott desterraba
esos pensamientos. Mir el parpadeante botn en su telfono y
dese haber podido encontrar las palabras para expresar la nica
pequea preocupacin que tena sobre sus planes.
La mayor parte del tiempo, ella no le dedicaba un segundo
Julie Cannon
*
El Boeing 757 rod al ritmo de un caracol hacia la puerta de
llegada. Lauren haba hecho este viaje mas veces de las que poda
contar, pero este viaje de regreso le haba parecido ms largo que la
mayora. Estaba en primera clase y el hombre sentado junto a ella
haba roncado todo el vuelo. Despus de tres das en una sala de
conferencias, bebiendo caf rancio, tomando declaraciones y, en
general, aguantando las tonteras del abogado de la defensa, sus
nervios estaban fritos y estaba desecha.
Sin embargo, su nivel de energa se elev, junto con la parte
superior de su telfono cuando marc el nmero de Elliott. Hola,
Teresa? Es Lauren Collier. Est ella?
Lo siento, seora Collier, pero la Sra. Foster est fuera de la
ciudad. Me pidi que la transfiriera a su telfono celular. Esperara
mientras yo la conecto?
Por supuesto. Su nimo cay en picada mientras esperaba por
Elliott en la lnea. Haba estado esperando esta noche durante toda la
semana.
Julie Cannon
Julie Cannon
*
Elliott llam a Lauren esa noche, y varias otras noches, mientras
estaba en Pars. Ya que tuvo que ir a Europa, decidi tomar ventaja e
Julie Cannon
Julie Cannon
Julie Cannon
Julie Cannon
*
Elliott despert en el avin con el olor del desayuno y no se
sorprendi de haber soado con Lauren. Por un momento,
experiment una punzada por su episodio con Isabella, pero
rpidamente empuj a un lado el sentimiento por ridculo. Despus de
intentar sin xito encontrar a Lauren la noche anterior, haba caminado
por horas en las calles, rodeando su hotel, hasta que el agotamiento
finalmente la llev a su interior. Metdicamente se haba duchado,
empacado sus maletas, y esperado a que un taxi la llevara al
aeropuerto.
En el saln de primera clase, esperando que el vuelo partiera,
haba llegado a una decisin. Rara vez se senta culpable por su
actividad sexual y no estaba a punto de empezar ahora. No estaba
comprometida con ninguna mujer y, en lo que se refera a ella, era
libre de ver a quien quisiera.
Elliott suspir y baj la bandeja. Y da la casualidad que la nica
mujer que yo quiero ver es ella.
Durmi intermitentemente durante el resto de su largo vuelo de
regreso a casa, pas la aduana rpidamente, luego se dirigi
directamente a su oficina desde el aeropuerto. Se enfrentara ms tarde
con el jet lag. A pesar de que Teresa se haba hecho cargo de los
asuntos urgentes, saba que su escritorio tendra pilas de trabajo, y
a pesar de que era viernes y que poda pasar el fin de semana
ponindose al da, odiaba cuando el trabajo se le sala de control.
Cuanto antes hiciera algunos avances en lo acumulado, mejor.
Apilado era un eufemismo. Elliott hoje su calendario de los
los prximos das y se atragant con el caf cuando vio la cena del
Consejo de Derechos Humanos pautada para maana por la noche.
Mierda, cmo pude haberlo olvidado! Era una gran defensora de la
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Captulo Ocho
Julie Cannon
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beb en su nuca.
He creado una gran conmocin en ti, Elliott?
S. S a todo lo que quieras.
Bien. Lauren se acerc.
La mente de Elliott se tambale con la sensacin de la piel
desnuda y el olor de la carne clida. Los msculos tensos saltaron por
debajo de sus dedos y enviaron impulsos de calor directamente al
punto sensible entre sus piernas. Los familiares golpes de excitacin
recorrieron su cuerpo, y sus boxers de seda hicieron poco para detener
los jugos que amenazaban con deslizarse por su pierna. No poda
recordar haber estado tan excitada por una mujer an con la ropa
puesta. Si no se cuidaba, haba una clara posibilidad de que se
avergonzara a s misma en la pista de baile. Haba estado en los brazos
de muchas mujeres, pero ninguna la haba hecho sentir as. Quera
hacer el amor con Lauren, de eso estaba segura. Pero haba algo ms
tambin, y luchaba por saber qu era exactamente. Inhalando la
fragancia del cabello de Lauren se dio por vencida de tratar de
descifrar sus respuestas y simplemente cerr los ojos y se perdi
en la mujer que estaba sosteniendo.
La msica termin demasiado pronto y Lauren las llev poco a
poco de vuelta a su mesa. Elliott no estaba tan conmocionada como lo
haba estado cuando vio por primera vez la espalda desnuda de
Lauren, pero todava no poda apartar los ojos de la piel que haba
acariciado recientemente. Apart la silla de Lauren y acarici sus
hombros desnudos despus de que ambas estuvieron sentadas. Elliott
levant su vaso de agua y el hielo tintine errticamente contra los
lados debido a sus manos temblorosas. Necesito ms que un vaso de
agua fra para apagar esta sed. Su pareja de baile estaba arrebatada y
sin aliento, y la miraba fijamente.
Elliott puso de pie. Salgamos a tomar aire fresco. Tal vez me
enfriar lo suficiente como para que no la viole justo en esta mesa.
Cogi la mano de Lauren y cuando sus ojos se fijaron su
respiracin se hizo profunda. Baj la cabeza para besar a Lauren
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Julie Cannon
Julie Cannon
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impresionante!
S, lo estuvo.
Podemos hacerlo de nuevo? Lauren no estaba segura de que
fuera a sobrevivir otro beso as, pero morira como una mujer feliz si
no sobreviva. Quera ser besada una y otra vez por esta mujer y flotar
en un deseo como nunca haba conocido. Y lo quera ahora.
Definitivamente. Elliott bes la nariz de Lauren, sus ojos, su
mandbula, y rpidamente volvi a sus labios. Simultneamente se
movi e insert su muslo entre los de Lauren. Sus manos estaban
igualmente ocupadas, y Lauren se qued sin aliento cuando Elliott le
cubri el pecho. Elliott recibi el mensaje fuerte y claro, y comenz
un viaje de besos hacia el botn superior del desafiante chaleco.
Lauren presion su cltoris palpitante contra la pierna de Elliott y
lanz un largo suspiro dando una seal de su placer. Dios, esto se
siente bien. Colocando una mano sobre el hombro de Elliott, empuj
un poco. Creo que deberamos retomar esto en alguna parte un poco
ms privada.
Elliott levant los ojos. Son las abogadas siempre tan
sensatas?
En realidad, s. Te lo ensean en la escuela de derecho, ya
sabes.
Elliott se ech a rer y de mala gana baj la mano del pecho que
tan perfectamente caba en la palma de su mano. Deben hacerlo. Mi
abogado es igualmente equilibrado.
Espero que no lo beses como acabas de hacerlo conmigo.
l no es mi tipo.
Cul es tu tipo?
Elliott dud un momento. Una mujer que es segura, atrevida,
clida, encantadora, inteligente, ingeniosa, ardientemente sensual, y
con ojos del color del cielo de verano.
Alguien as por aqu? brome Lauren. No estaba segura de si
estaba buscando un cumplido o si, simplemente, disfrutaba or hablar
de la atraccin de Elliott hacia ella. De cualquier manera, la
Julie Cannon
embriagaba.
S. Particularmente la parte de la sensualidad ardiente. El
cuerpo de Elliott estaba tocando la conocida cancin del deseo, pero
haba varios nuevos versos emergiendo, y no conoca las palabras en
ellos. Haba ternura por la mujer en sus brazos, una ternura que no
admita explicacin. Quera que Lauren fuera feliz. Quera que ella
tuviera todo lo que necesitaba. Quera mantenerla a salvo. Despus de
lo que se sinti como una eternidad, le pregunt: Ests lista?
Definitivamente haba un doble sentido en su pregunta.
S.
Lauren estaba conmocionada por cmo una simple palabra de
dos letras cambiara su vida para siempre. Haba luchado con su
creciente atraccin hacia las mujeres, sin saber si estaba dispuesta a
asumir un compromiso con el lesbianismo. Haba descartado la
bisexualidad. No estaba interesada en los hombres, incluso cuando
trat con mucho empeo estar comprometida con uno, y lo ms
importante, no crea que la bisexualidad fuera segura. Cruzar la lnea a
otro estilo de vida, especialmente uno controvertido, no era algo que
tomara a la ligera. La decisin podra afectar su carrera, sus amigos
podran abandonarla, y su familia podra repudiarla. En el fondo, se
senta segura de que su familia respetara su decisin, pero no poda
estar tan segura de lo que podra ocurrir en las otras reas de su vida.
La nica cosa de la que estaba completamente segura era de que
quera hacer el amor con Elliott Foster.
Se dirigieron al auto de Elliott y de alguna manera condujeron a
la casa de Lauren con su libido bajo control. Cuando se detuvieron
fuera, Lauren tom una respiracin tranquilizante. Quieres una
copa? Jess, que pregunta estpida.
Elliott se volvi en su asiento enfrentndola directamente. El
brillo en sus ojos redujo una cierta tensin. Estara ms interesada en
el desayuno.
Cmo te gustan tus huevos?
Abandonaron el coche y apenas haban entrado en el amplio
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Captulo Nueve
Julie Cannon
Julie Cannon
*
Lauren escuch el sonido de la lluvia de la maana por cuarto
da consecutivo. El aire fresco sopl a travs de una abertura de gran
tamao en su habitacin de hotel, ponindole la piel de gallina. Mir
los grandes nmeros rojos en el frente de su reloj de viaje y gimi.
Slo diez minutos haban pasado desde la ltima vez que lo cheque.
Frustrada por otra noche sin dormir, arroj la colcha y sintoniz la
CNN. Durante unos minutos se sent temblando en sus boxers de seda
cortos y musculosa mientras observaba la cobertura habitual de
noticias deprimentes, luego se dirigi hasta el bao para prepararse
para otro da aburrido.
El viaje haba llegado de repente, cuando Bradley & Taylor fue
notificada por la Junta de la Bolsa de Valores de la India que
estaban siendo investigados como parte de una investigacin interna
de la Bolsa de Valores de Bangalore. Los cargos eran falsos, pero an
as Lauren fue requerida de comparecer en persona. Haba tenido dos
das completos para dejar en orden su oficina, empacar y estar en un
avin que se diriga al otro lado del mundo.
Se cepill los dientes y estaba a punto de encender la ducha
cuando se congel ante el sonido de una voz familiar. Poco a poco se
asom por la puerta del bao y su corazn dio un salto en su garganta.
La cara de Elliott llenaba la pantalla de televisin mientras responda a
las preguntas de un reportero de negocios. Lauren la estudi, notando
los crculos bajo sus ojos que el maquillaje de televisin no poda
ocultar absolutamente. Una chaqueta color rojo oscuro acentaba su
tez, y aretes de diamantes brillaban cuando hablaba. Se vea ms
delgada, y Lauren detect un costado que no haba visto antes.
La esquina de la cama se hundi cuando Lauren se sent all,
transfigurada. Se le revolvi el estmago cuando Elliott se ri de algo.
Julie Cannon
Julie Cannon
*
Elliott se sobresalt por una bocina sonando en algn lugar a la
distancia. El calambre en su cuello le indic que se haba dormido
brevemente. Parpadeando varias veces, mir a sus alrededores.
El antiguo barrio todava se vea igual. Los rboles eran ms
altos, los arbustos ms tupidos, y salvo por los coches diferentes
estacionados a lo largo de la calle, Claude Boulevard estaba tal cual
Elliott lo recordaba. Haba pasado los primeros aos de su infancia en
la casa con el sinuoso camino de entrada, y no importaba en cuntos
lugares hubiera vivido desde entonces, segua pensando en sta como
su casa. Baj la ventanilla y apag el coche. El silencio se salpicaba
con los sonidos de un perro ladrando y las aves dndole la bienvenida
a la maana. El nico movimiento en la calle durante la ltima hora
haba sido un autobs escolar vaco conduciendo por ah.
Elliott se acomod ms en los cmodos asientos de cuero y bebi
un sorbo de caf tibio de una taza de plstico que haba llenado en el
mini-mart a una pocas cuadras de distancia. Desde su ubicacin pudo
ver al otro lado de la calle las cortinas cerradas sobre la ventana donde
su madre se paraba, esperando que regresara a casa desde la escuela.
Record la ltima vez que la vio all.
Elliott tena seis aos y se haba apresurado a casa con su
primera boleta de calificaciones apretada en su puo, completada con
letras y nmeros que ella no haba aprendido todava, pero estaba
segura de que iban a decirle a su madre de lo inteligente que era.
Julie Cannon
Julie Cannon
*
El eco insistente de su taconeo se oa en todo el vestbulo
mientras se acercaba a la recepcin. Echando un vistazo a su reloj de
pulsera, Lauren inform al recepcionista que el taxi que haba
programado an no haba llegado. Se enfureci ante la insolencia del
hombre detrs del mostrador, por lo que pidi hablar con el gerente
del hotel, quien, despus de otros diez minutos, slo fue capaz de
generar una disculpa y no un taxi. Frustrada con la falta de servicios,
incluyendo servicio de taxi confiable, decidi que, si iba a llegar a
la reunin con el tiempo que restaba, tendra que caminar.
Cinco minutos despus de su decisin, se lament. La lluvia se
haba detenido y en su lugar haba un aire tan hmedo que el vapor se
elevaba de los charcos que se vio obligada a esquivar. Las calles
estaban repletas de personas, todas ellas apuradas por llegar a alguna
parte. Una mujer gorda vestida con un tradicional sari indio casi
expuls el maletn de Lauren de su mano en su prisa por cruzar la
calle. El sudor se escurra por el costado de la cara de Lauren, y
maldijo cuando su zapato emergi de una pila de barro que no pudo
Julie Cannon
Julie Cannon
*
Elliott lanz las llaves del coche en el mostrador y se quit la
la ropa mientras caminaba por su casa. Necesitaba una ducha de agua
caliente y un buen trago. Optando por combinar los dos, se detuvo en
el bar para verter Chivas en un vaso de gran espesor. Estaba desnuda
para el momento en sus pies pisaron los azulejos fros del piso del
cuarto de Bao.
El agua hirviendo golpe su cuello y su espalda, y se qued
inmvil durante varios minutos, deseando lavar su melancola. Luego
cogi el jabn y enjabon todo su cuerpo antes de enjuagarse. La
Julie Cannon
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Captulo Diez
Julie Cannon
las palabras y el tono, sin ira, la lgica del argumento de Lauren haba
comenzado a tener sentido. No haban sido todas vrgenes alguna
vez? No era realmente un halago que Lauren hubiera querido
compartirse a s misma con Elliott en lugar de con otra mujer? No
poda tener escasez de ofertas. Tal vez ya haba satisfecho sus deseos,
o curiosidad, con otra persona.
Expulsando el pensamiento de su mente, Elliott sigui todo
pequeo movimiento de las manos de Lauren, imaginando que se
movan sobre su cuerpo y respondan a su deseo. Se centr en la boca
de Lauren y anhel una vez ms el roce tentador de esos labios contra
los suyos. Haban pasado semanas y no haba habido ningn contacto
entre ellas. Elliott se pregunt si ya era demasiado tarde; tena el
presentimiento de que el encanto no corta mucho el hielo cuando
arruinas las cosas con un cierto tipo de mujer. Lauren haba dejado la
pelota en su campo y al parecer, no estaba bromeando. Elliott haba
esperado recibir una llamada de seguimiento. Se haba imaginado a
Lauren tratando de persuadirla a otra cita. En su lugar se haba
alejado. Si no otra cosa, eso deca algo acerca de su agenda; por una
vez, la riqueza de Elliott no era la carta ganadora.
Despus de varios minutos de conversacin benigna, Lauren
supo que estaba siendo vigilada. No quera parecer grosera,
casualmente traslad su mirada de la mujer con la que estaba hablando
y de inmediato se conect con un familiar par de clidos ojos
castaos. Elliott! Haba sospechado que podra verla en el beneficio,
dado el compromiso de Elliott con las organizaciones benficas de
nios, y se haba preparado para este momento. Una rfaga de
agitacin se le arremolin en el estmago de todos modos.
Elliott pareca compuesta, sosteniendo una copa y apoyada en
un pilar decorado. Con algo parecido a la desesperacin, Lauren
se dio cuenta de lo mucho que an la deseaba. Dios me d la fuerza
para no perder la cabeza. Estaba decidida a no acercarse a Elliott,
cualquiera que fuera el orgullo que tena iba a permanecer intacto.
Asinti en reconocimiento corts pero distante, y los ojos de Elliott se
Julie Cannon
*
Elliott, que grata sorpresa. la voz de Rebecca rezumaba
sarcasmo.
No juegues conmigo. Elliott dej caer las llaves del coche en
Julie Cannon
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Julie Cannon
*
Lauren se qued mirando el techo de su habitacin, sin poder
dormir despus del extrao giro de los acontecimientos en el
beneficio. Obviamente, una ex enojada quera avergonzar a Elliott en
pblico, y haba tenido xito. Los medios de comunicacin estaran
tras esta historia hasta que llegara el prximo escndalo. Lauren estaba
agradecida de que no se haba involucrado con Elliott; su cara estara
en todas partes tambin, y cmo se lo explicara a Thomas Merison y
Charles Comstock?
Pens en llamar a Elliott con unas palabras de apoyo. Sin
importar lo que pas, o no pas, entre ellas, ste iba a ser un momento
difcil para ella y lo ms decente que poda hacer era acercarse.
Durante varios minutos puso su mano vacilante en el telfono junto a
su cama. Su despertador marcaba la 01 a.m. Los amigos no se llaman
unos a otros en la mitad de la noche. Eso es algo que slo los amantes
haran.
Esta no era una emergencia, y si fuera por completo sincera
consigo misma, tena un motivo ulterior. Sin duda quera asegurarse
de que Elliott estaba bien, pero tambin quera sentir los labios de
Elliott en los suyos, y el toque de sus manos. Necesitaba escuchar a
Elliott decir que no tena sentido tener esperanza. Se puso de lado y se
sinti muy sola en su cama, pero a pesar de sus anhelos reafirm su
posicin: no iba a acercarse a Elliott de nuevo. Si ella me quiere,
entonces va a tener que venir a buscarme.
*
Ryan, a quin conocemos en el FBI?
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ponerse las cosas fuera de control, tan rpido? No puedo creer esto.
Ryan se lanz a la especulacin rpida. Sabes, esto puede
no tener que ver contigo especficamente. Podras estar atrapada en
una investigacin ms amplia. No asumamos nada en ese sentido.
Tenemos que llegar al fondo de esto.
Una investigacin? Ella estaba escuchando cosas.
Por cierto, he visto el incidente de la recaudacin de fondos en
las noticias de la tarde. Ryan son inalterable. He empezado ya-
Estuvo en la televisin? Tendra que haber adivinado que
alguien habra tenido un telfono celular grabando.
Temo que s. Como ya he dicho, he comenzado ya a controlar
los daos. Tu cuado me llam justo despus de que lo pasaron. Vas a
tener que mantener un ojo sobre l.
Oh, a Mark le va a encantar esto. l lo usara en su contra
si pudiera, no haba duda sobre eso. Elliott esperaba que no pudiera
rastrear a Rebecca; tendra que atarle las manos de alguna manera
antes de lo hiciera.
Le dije que era una acosadora, dijo Ryan. Pero en realidad no
deberamos tener esta discusin ahora. Tenemos que encontrarnos tan
pronto como llegues al trabajo. Me dar una vuelta por ah. No, mejor
an, encontrmonos en la cafetera de Sandstone Drive. Por lo menos
sabemos que no est intervenida.
Bueno, Elliott estuvo de acuerdo con la sombra resolucin. Su
prximo pensamiento lo expres en voz alta. Dej que esto avanzara
demasiado. Se haba permitido distraerse, y haba sido terca. Su
negativa a pagarle a Rebecca haba sido una cuestin de principios,
pero a veces los principios eran un lujo.
Ryan ley su mente, como lo haca con ms frecuencia de lo que
a ella le gustaba. Es bueno que no le hayas pagado.
De alguna manera, No estoy entendiendo eso.
El humor seco de Elliott, sac una pequea risita de su viejo
amigo.
Piensa en ello. Los culpables son, por lo general, los primeros
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ella despus de esta noche, Elliott tendra que correr el riesgo de caer
an ms bajo en su opinin, dicindole todo lo que saba.
Se levant y localiz las llaves del coche, tratando de recordar
dnde haba puesto su telfono celular. Cmo tomara Lauren una
extraa llamada telefnica de ella a estas horas de la noche? Le
sonara como una loca, hablando del FBI y las escuchas telefnicas.
Tengo que verla, cara a cara, y esto no puede esperar.
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Captulo Once
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*
El sol de media maana entibiaba el rostro de Lauren cuando se
sent en su deck disfrutando de la segunda taza de caf mientras
esperaba que Elliott la recogiera. Se haba sorprendido por la
invitacin al juego de bisbol este fin de semana. Elliott la haba
llamado despus de su reunin del Lunes con Ryan, dndole las
gracias de nuevo y le haba preguntado si quera acompaarla. En los
das posteriores, Elliott le haba enviado una cesta de frutas y la haba
llamado por telfono un par de veces para mantenerla al tanto sobre su
progreso con la nube que se cerna sobre ella. Hasta el momento, no
haban averiguado mucho, y Ryan estaba instando a Elliott a que
hicieran arreglos para hablar con un agente especial que conoca.
Elliott haba dicho que lo pensara.
Los ojos de Lauren se sintieron atrados por una de entre varias
personas que corran a lo largo de la costa. Salud con la mano
reconociendo a la menuda mujer en traje naranja que pas corriendo
por delante de ella. Anne viva al lado, y en los pasados cinco aos se
haban hecho amigas. Lauren tuvo claro desde el principio que Anne
era lesbiana, y en ocasiones haban hablado de ello.
Lauren record la primera fiesta a la que Anne la haba invitado.
Haba estado un poco nerviosa siendo una de las pocas mujeres
heterosexuales en un grupo principalmente de lesbianas, pero Anne le
haba asegurado que no intentaran ligar con ella y que,
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estuviese bien.
Lauren? Elliott estaba parada en la esquina del deck,
mirndola con curiosidad.
Y est definitivamente bien contigo, Elliott Foster. Hola.
Pens que podras estar aqu. Toqu el timbre varias veces y no
tuve respuesta. Sin que Lauren lo supiera, Elliott haba tomado la
oportunidad de observarla en silencio antes de anunciar su llegada.
Observar a Lauren le quit el aliento. Estaba absolutamente
hermosa, relajada, con la brisa del mar agitando su pelo.
Lauren se enderez en su silla. Lo siento, me sorprendiste
soando despierta.
Si esta fuera mi casa, eso todo lo que sera capaz de hacer.
Puedo ver por qu te gusta estar aqu.
Podra sentarme aqu todo el da. De hecho, algunos das lo
hago, dijo Lauren con una sonrisa nostlgica. Pero no hoy. Hoy
tengo un juego de bisbol al que ir, y amo el bisbol
La tarde era hermosa, pens una hora ms tarde cuando
estuvieron finalmente en el estadio. Estos asientos son fabulosos,
dijo ella, mirando al campo. Estaban en el segundo nivel, directamente
detrs del plato.
Gracias. Habr un montn de pelotas de foul, por lo que
tendremos que prestar atencin al juego. Y t estas demasiado linda
con esa gorra de bisbol y tus Ray-Ban.
Elliott se haba sorprendido al enterarse de que Lauren era una
vida aficionada al bisbol. Elliott disfrutaba la experiencia de ir a un
juego, comer un perro caliente y beber una o dos cervezas, mientras
animaba a su equipo local, pero Lauren mantena un dilogo abierto
sobre los jugadores y sus estadsticas de principio a fin. Varias veces
durante el juego Lauren se acerc y toc el brazo de Elliott cuando no
poda controlar su entusiasmo en una jugada especialmente
interesante. Cada vez que esto suceda, Elliott poda sentir el calor
viajando de su brazo y aterrizando en su entrepierna. Dios mo, Hace
calor hoy.
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Captulo Doce
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La sola idea hizo que apretara los dientes. Por qu debera ella,
un miembro inocente del pblico, justificarse ante una agencia federal
que haba ignorado por completo su derecho a la privacidad Ellos
deberan estar aqu, explicndose a s mismos con ella.
Tienes que tener cuidado con esto. Si no lo haces a tu manera,
va a pasar a su manera, y confa en m en esto Elliott, t no quieres
eso.
Golpe su puo en el escritorio. Sabes tan bien como yo que los
ricos pagan todo el tiempo para hacer que este tipo de mierda
desaparezca. No puedes simplemente elevar una mocin o algo as?
Hazlos presentar cargos o que salgan de mi vida.
Su paciencia se estaba agotando. No es tan simple. Tenemos que
saber por qu eres su blanco. Si cooperas ahora, al menos podremos
ver hacia dnde van sus preguntas.
Puede ser cualquier cosa personal. Viva su vida como ella
quera, no de la manera que los otros esperaban que lo hiciera, pero no
estaba haciendo nada ilegal y mientras por mas tiempo estaba a la
cabeza de Foster McKenzie, menos vida personal tena de todos
modos. Se que no soy exactamente de la clase dirigente, deben tener
cosas mejores que hacer que fastidiarme debido a... Se fue apagando.
Todava no tenemos una idea acerca de lo que se trata.
No podemos estar seguros de que es a ti a quien estn
investigando, le record Ryan. Es slo una posibilidad. De todos
modos, cundo fue la ltima vez que te miraste al espejo? Tu eres de
la clase dirigente, ya sea que te guste o no. Slo has tenido la maldita
suerte de haber navegado a travs de la vida de la forma en que lo has
hecho hasta ahora. Cuando ella no respondi, l quit todos los
frenos. Estoy sorprendido, Elliott. No es tpico de ti huir de un reto.
Estaba en lo cierto. Nunca se haba retirado de una pelea en su
vida. Poda vivir con las risitas de especulacin de los medios sobre la
bofetada - su publicista se estaba asegurando de que sus consecuencias
tambin fueran impresas: Rica CEO acechada por una busca fortunas
que estaba inventando historias acerca de su asociacin.
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*
Lauren abri la puerta a Elliott que vesta jeans descoloridos que
acentuaban sus largas piernas, una camisa de cambray azul, y botas.
Oh mi Dios, ella luce ardiente. Mantente fresca Lauren.
Hola, siento no haber llamado. Ests libre para cenar?
pregunt Elliott esperanzada.
Haba estado sentada en su coche al final de la calle de Lauren
durante treinta minutos antes de llamar al timbre. Saba que debera
haber llamado primero, pero la reunin con el FBI esa maana haba
sido inquietante y tena una necesidad imperiosa para ver Lauren.
Haba respondido preguntas durante horas, y a instancias de Ryan se
acogi a la Quinta Enmienda en varias. Cuando todo termin, ella y
Ryan no tenan nada concreto, pero la direccin del interrogatorio les
dio algunas pistas. El FBI quera tener acceso a la informacin de
todos los clientes de Foster McKenzie. Ellos se negaron a sealar a
clientes individuales o a identificar cualquier sector de la industria en
particular que quisieran explorar. Sin embargo, en algunas de las
preguntas que le hicieron, Elliott haba detectado un sesgo hacia las
compaas extranjeras. Tambin le hicieron muchas preguntas sobre
sus viaje al extranjero, incluidas las previsibles acerca de sus
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*
Quieres dar un paseo por la costa? pregunt Elliott cuando se
detuvieron en lo de Lauren varias horas despus. Haba tenido una
noche agradable y no estaba preparada para que terminara.
Me encantara. Necesito bajar esta cena.
Haba comido demasiado, incluyendo una pieza decadente de
pastel de queso, y se senta ms que un poco repleta. Un poco ms de
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la puerta.
No tienes que hacerlo.
Mi padre me cri mejor que eso. l volvera como un fantasma
si permitiese que una hermosa mujer caminara hacia la puerta sin
compaa.
Elliott puso la mano en la parte baja de la espalda de Lauren de
nuevo a medida que ascendan los pocos escalones hasta la puerta
principal.
La mente de Lauren se aceler mientras abra el cerrojo. Fue
esto una cita? Qu hacemos ahora? Va a darme un beso? Despus
de varios momentos era evidente que Elliott no saba las respuestas.
Gracias de nuevo por una noche encantadora, Elliott. Buenas
noches.
Elliott se sinti sorprendida y aliviada cuando Lauren cerr la
puerta. Su mente y su cuerpo haba estado en conflicto directo sobre lo
que quera hacer, de pie junto a Lauren en su porche. Luch con si
deba decirle simplemente buenas noches o besarla sin sentido. Lauren
no haba dado ninguna indicacin de su preferencia, y Elliott sinti
que no sera rechazada si se mova hacia ella. Pero antes de que una
opcin pudiera prevalecer sobre la otra, Lauren haba tomado la
decisin de sus manos diciendo Buenas Noches. Con agudo
entendimiento Elliott record las palabras de Lauren: No me
aproximar a ti de nuevo. Mientras caminaba de regreso a su coche,
entendi que Lauren quiso decir exactamente lo que haba dicho.
*
Mark, te lo he dicho antes, no te quiero en mi oficina si no estoy
aqu. Su cuado tena el culo en su silla y sus pies sobre su escritorio.
Ella quera darle una bofetada a la mirada de suficiencia de su cara,
pero se abstuvo. Ella estaba casi al lmite con l, condenada Stephanie.
Buenas tardes a ti tambin, Elliott. l no se movi.
Elliott camin alrededor de la mesa y golpe los pies fuera del
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Captulo Trece
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Teresa resopl.
Hay una cosa que voy a hacer por ti, Rebecca, dijo Elliott en
tono benvolo. Tu me estas pidiendo dinero porque tuvimos sexo,
verdad?
Rebecca asinti con la cabeza, inquieta. Si lo pones de esa
manera.
Las putas tienen derecho a ser pagadas por sus servicios. Debo
admitir, no era consciente de que se supona que nuestro acuerdo era
profesional, pero conozco mis responsabilidades. Elliott abri el
cajn lateral de su escritorio y sac un fajo de billetes, luego se
levant y camin alrededor de su escritorio para estar delante de
Rebecca. Arroj los billetes en su regazo. Esto es lo que vales. Ahora
vete.
Rebecca no dijo otra palabra. Puso el dinero en efectivo en su
bolso Gucci y se march.
*
Ella parece ser una gran chica, observ Elliott mientras ella y
Lauren esperaban fuera del probador a que Tonya terminara de
probarse pantalones vaqueros. Su conversacin de esa maana se
haba convertido en almuerzo y en fiesta de compras.
Lauren sonri. S lo es. Ha recorrido un largo camino.
Estoy segura de que t eres la razn. Es evidente que te
admira.
Lauren acept el cumplido. Gracias. Es una gran
responsabilidad, pero Tonya a hecho todo el trabajo. Slo estoy
disfrutando de ayudarla a llegar all. No hemos perdido un slo da
programado desde que estamos juntas. Es importante para las dos.
Continuamente me sorprendes dijo Elliott, pensando en voz
alta.
Lo tomar como un cumplido... supongo brome Lauren.
La conversacin se vio frustrada cuando Tonya sali del
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esta manera. Saba que Elliott la haba deseado una vez, y siempre
haba un nivel de coqueteo entre ellas, pero hasta este momento haba
estado insegura de sus verdaderos sentimientos. El deseo no
disimulado de sus ojos era tan fuerte y claro como si lo hubiera
gritado desde la cima de una montaa. El cuerpo de Lauren se pona
caliente en los lugares por donde viajaban los ojos de Elliott y supo
que sus pezones se haban endurecido cuando los ojos de Elliott se
agrandaron al llegar a ese punto.
Afortunadamente, o desafortunadamente, Tonya se puso delante
de Lauren para mostrarle otro traje de bao antes de que cualquiera de
ellas pudiera actuar, y Lauren no saba si se senta aliviada o
decepcionada. Dio un paso atrs al vestuario con piernas temblorosas.
Nunca se haba sentido tan desnuda como lo haba hecho cuando vio
la mirada de deseo ardiente en los ojos de Elliott. Se tom su tiempo
para vestirse, reacia, sin embargo ansiosa de estar cara a cara con la
mujer que la haba violado con sus ojos. Su mejillas se sonrojaron
cuando regres con sus compaeras y cuando sus ojos se encontraron
con los de Elliott se sinti tan desnuda como lo haba hecho haca un
momento, a pesar de que estaba completamente vestida.
Elliott estuvo apagada el resto del viaje de compras y mantuvo
su distancia de Lauren para aliviar la tentacin de extender la mano y
tocarla. Si obedeca a sus impulsos, saba que no sera capaz de
detenerse y le daba miedo. A medida que iban de tienda en tienda,
Elliott se distrajo hablando con Tonya y hacindose cargo del
creciente nmero de bolsas de compras.
Qu tal si las llevo a ustedes dos, hermosas mujeres, a cenar?
Dirigi la pregunta a Lauren cuando todo el mundo haba aceptado
que sus pies estaban matndolas y que era hora de parar.
Tonya acept entusiasmada, y despus de una cena de
hamburguesas y helado la llevaron a su casa, a continuacin Lauren
llev a Elliott de regreso al estacionamiento de su oficina a recoger su
coche.
Lo pas muy bien hoy, dijo Elliott mientras Lauren
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*
No puedo hacer esto! No puedo hacer esto! La cara de Lauren
centelleaba en frente de sus ojos, y Elliott se apart de la morena
desnuda acostada debajo de ella. No puedo hacer esto, Lo siento.
Rpidamente recogi sus ropas y sali por la puerta antes de que la
mujer saliera de la cama.
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objetemos la semntica.
Me sent como si la estuviera engaando. Elliott se sorprendi
al escucharse a s misma diciendo esto. Nunca he sentido as por
nadie. Quiero saber todo sobre ella, lo que hace, lo que piensa, lo que
le gusta para el desayuno, y donde le gusta ir de vacaciones. Llora en
las pelculas tristes?, cul es su helado favorito?... se call
y se frot la parte de atrs de su cuello. Quiero ser una mejor persona
para ella.
Eso no suena como t. Victoria frunci el ceo. No has tenido
un accidente o algo, verdad? Tal vez una lesin en la cabeza...
Piensas que estoy loca?
No, creo que algo ha puesto algo de sentido en ti al final. Me
estaba preguntando cmo sucedi.
Podra haber sabido que no tendra ninguna simpata de ti
Elliott hizo una pausa, sumida en sus pensamientos por un momento,
tratando de analizar el problema. No s qu hacer, Vic. Quiero decir,
Dios mo, hemos salido unas cuantas veces, y salvo por el principio,
apenas nos hemos besado. Si no tengo una mujer en la cama para la
segunda cita, sigo adelante.
Entonce por qu sigues ah? La pregunta de Victoria era
sencilla.
Porque me gusta. Me refiero a que realmente me gusta. Creo
que nunca me haba gustado una mujer antes.
Elliott, tu slo has estado interesada en entrar en los pantalones
de una mujer, no en su cabeza. Quin es esta diosa, de todos modos?
Es Lauren Collier.
La mujer que conociste en los Premios de la Alcalda
S.
No estoy escuchando por qu es un problema, dijo Victoria.
Elliott lanz un profundo suspiro. Ella es heterosexual.
Qu? Ests bromeando!
Ojal lo estuviera.
Mierda. Nunca me hubiera imaginado eso. Comienza desde el
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Captulo Catorce
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*
La esencia familiar llen la nariz de Elliott cuando Lauren pas a
su lado. Te ves genial.? En realidad te ves fabulosa.
Lauren llevaba pantalones azul marino y camisa blanca oxford de
manga larga con cuello con botones. Sus mocasines marrones hacan
juego con su cinturn y usaba un clip en la base del cuello sosteniendo
el cabello lejos de su rostro.
Gracias. De repente, sinti que sus nervios se asentaron y se
sinti sorprendentemente tranquila. Haba sido una ruina desde que
Elliott llam y la invit a su casa a cenar.
Elliott estaba tan nerviosa que apenas poda comer, y mucho
menos disfrutar del sabor de la cocina servida por uno de los ms
finos restaurantes en la ciudad. Cuando Lauren le sonri, dej caer el
tenedor y murmur una disculpa avergonzada. Su incertidumbre sobre
hacia dnde las llevara esta noche anulaba su confianza. La cena era a
menudo el preludio del sexo, y en algunas ocasiones era una barrera
irritante para su objetivo final. Esta noche, sin embargo, era diferente.
No estaba segura de que quera que la comida terminara, sin embargo,
no poda esperar.
Mientras ms nerviosa estaba Elliott, ms tranquila se volva
Lauren. Era casi cmico ver la lucha de Elliott cuando siempre haba
sido tan pulida y sofisticada.
Al trmino de la comida Lauren se ofreci a ayudar a limpiar el
mesa.
No, no es necesario. Ruth vendr en la maana y limpiar las
cosas.
Ruth?
Mi ama de llaves, aclar Elliott. En realidad, es ms un
elemento de la familia que una criada. Ella ha trabajado para mi
familia probablemente por veinticinco aos. No puedo comer
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ltima vez que estuviste en esta situacin dijiste algo que ech agua
fra a esta pasin. No digas una palabra. Rpidamente tiro de la
camisa de Elliott fuera del pantaln. Cuando busc bajo la tela, Elliott
salt, y la respuesta a su contacto hizo que el corazn de Lauren se
disparara. Explor la carne dura, suave, con ambas manos y Elliott
se alej de ella un poco, un instante antes de que el botn de su
pantaln se abriera.
Lauren la anim de la nica manera que saba, con su cuerpo y
sus manos, y pronto su cremallera se deslizaba hacia abajo. Los dedos
de Elliott se movieron dentro de sus pantalones y presionaron
ligeramente entre sus piernas. A travs del rugido de su propio placer
en sus odos Lauren trabaj sus manos lentamente a lo largo del
estmago de Elliott a sus pechos hasta que Elliott gimi y aument la
presin de sus dedos en la entrepierna de Lauren.
Lauren arrastr la boca de los labios que seguan devorndola.
Elliott?
La pasin de Elliott se enardeci al or el sonido sin aliento de su
nombre.
Hmm...? Acarici con la nariz el cuello de Lauren.
Creo que no puedo sostenerme ms.
Elliott sonri contra su cuello. Entonces tal vez mejor nos
recostamos.
Sus miradas se encontraron mientras Elliott busc detrs de ellas
y sac el cobertor sobre la cama king-size. Recost a Lauren sobre las
sbanas almidonadas y Lauren la atrajo hacia abajo, asegurndose de
que su contacto fuese completo. Elliott se volvi rpidamente a los
pechos que estaban rogando por su atencin, y lo que empez como
besos de mariposa, rpidamente se volvi ms profundo cuando sus
labios y su lengua no podan tener lo suficiente.
La sensacin era tan exquisita que Lauren agarr la sbana
con ambas manos. Se qued sin aliento en la garganta mientras Elliott
besaba su camino hasta la parte superior de sus pantalones. Elliott
levant la boca el tiempo suficiente para deslizarlos hacia abajo sobre
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sudor cubra su cuello y atrajo los labios de Elliott una vez ms.
Mientras besaba y lama la piel sensible, comenz a acariciarla de
nuevo. Lauren inmediatamente levant las caderas en respuesta.
Elliott rpidamente cambi de posicin y reemplaz su mano con
el primer contacto tentativo de sus labios. Lauren se qued sin aliento,
y su cabeza comenz a flotar mientras Elliott lentamente utilizaba su
lengua para explorar cada centmetro de ella.
Oh, Dios, Elliott.
Elliott cubri con sus manos el culo firme de la mujer que estaba
disfrutando plenamente. Levant a Lauren ligeramente para permitir
un mayor acceso y abri sus ojos, esta vez quera ver como Lauren
llegaba a su clmax. El cltoris por debajo de su lengua se volvi duro
y Lauren se apoder de las sbanas con las dos manos, retorcindose
en la cama. Se vino con una mayor intensidad que antes, y Elliott casi
lleg a su clmax al ver esta hermosa mujer temblar de deseo.
Mientras Lauren bajaba de su orgasmo, Elliott desaceler su
lengua, saboreando los jugos que fluan libremente. Respirando con
dificultad, Lauren se quedaba sin aliento cada vez que la lengua de
Elliott se deslizaba ligeramente por encima de su cltoris. Finalmente
Elliott dej el lugar clido, fragante y rod sobre su espalda, teniendo
a Lauren en sus brazos y acunndola mientras las secuelas de su
orgasmo abandonaban su cuerpo. Lauren se acomod como si
siempre hubiera estado all. Elliott se agach y tir de la sbana
para cubrirse los dos. Acarici suavemente la espalda de Lauren y
alej los mechones de pelo hmedo de la cara.
Ests bien? -pregunt en voz baja.
Le tom varios minutos a Lauren recuperar el aliento y pensar
claramente de nuevo. Nunca haba imaginado el exquisito placer que
acababa de experimentar. De hecho, nunca haba tenido orgasmos
mltiples.
No estoy segura, -dijo con una dbil sonrisa. Me siento como
si acabara de morir y hubiese ido al cielo.Movi el brazo para rodear
la cintura de Elliott y apoy la pierna por encima de los muslos duros
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de Elliott.
Puedo decir honestamente que ests muy viva. Elliott se ri y
bes la parte superior de la cabeza de Lauren.
Dios, mas que nunca. Eso fue increble.
Las mujeres yacieron en silencio durante varios minutos, y
Elliott estaba contenta simplemente con sostener a Lauren y sentir su
cuerpo caliente contra el suyo. A pesar de que su propio cuerpo estaba
ardiendo en deseo, dejara que Lauren marcara el ritmo de este lado de
su unin.
Lauren no se haba dormido, y su mente se devanaba con
pensamientos de la mujer que la abrazaba. Fue tan delicada. De
pronto, experiment un deseo irresistible de tocar a la mujer que le
haba dado tanto placer. Tentativamente movi su mano sobre el
estmago de Elliott en una suave caricia. Los msculos bajo
sus dedos se estremecieron y Elliott la sostuvo con ms fuerza. As
que esto es lo que siente que una mujer responda a tu tacto. Es
maravilloso. Sintindose facultada por la respuesta de Elliott a su
caricia, Lauren traslad su mano sobre el estmago tenso, acercndose
al pecho, donde descansaba su cabeza. Se dio cuenta de que la
respiracin de Elliott era poco profunda y su cuerpo se arrebataba.
Elliott? -pregunt tmidamente.
Hmm...? La mano errante de Lauren comenzaba a volverla
loca. Cuando ella no continu despus de unos momentos, Elliott
tir de ella encima de s. Dios, se siente bien tenerte all. Qu pasa,
Lauren? -pregunt ella, quitndose el pelo de la cara.
Lauren vacil, incapaz de pronunciar las palabras. Elliott mir
suavemente en sus ojos, lo que le dio la fuerza para decir, No s qu
hacer. Apart sus ojos de los de Elliott. Supona que lo que haba
sucedido haba sido una leccin, pero cmo poda estar segura de que
Elliott disfrutara de las mismas cosas? Me siento tan inadecuada. Me
siento como si fuera una virgen de diecisis aos de edad, de nuevo.
Elliott levant la barbilla de Lauren con sus dedos, atrayendo
sus ojos a los suyos de nuevo. Escucha con tus sentidos. Escucha con
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Captulo Quince
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maanera.
Elliott mir a los ojos que estaban llenos del resplandor de
despus de hacer el amor. Pudiste haberme engaado.
Debe ser la compaa que he estado teniendo ltimamente.
Lauren le hizo cosquillas a Elliott en el estmago.
Un perro del vecino ladraba, sealando el comienzo de otro da.
Elliott ofreci, Caf?
Ms tarde, dijo Lauren mientras empujaba a Elliott sobre su
espalda y se sentaba a horcajadas sobre sus muslos.
Ms audaz y segura de lo que haba estado la noche anterior,
explor el cuerpo de Elliott, disfrutando de su belleza a la luz de las
primeras horas del da. Vio como la carne de Elliott reaccionaba a su
contacto y cmo su pecho suba y bajaba con cada respiracin
profunda. Se qued hipnotizada cuando vio los ojos de Elliott
cristalizarse cuando sus dedos entraron y le acarici el cltoris. Elliott
tena razn cuando haba hablado acerca de cmo los sentidos te
cuentan la historia de la pasin de tu amante. Las vistas y sonidos de
Elliott llegando al climax bajo sus caricias eran abrumadoras.
Lauren estaba ms feliz de lo que haba estado nunca cuando
sali de la cama despus de otro clmax. Msculos que nunca supo
que tena le hablaron. Entr en el cuarto de bao, se lav la cara y se
mir en el espejo. Su reflejo le mostr a la misma mujer con los ojos
claros y el pelo que definitivamente necesitaba una visita al saln de
belleza, pero no reflejaba el cambio que ahora senta en su interior.
Vio a Elliott aproximndose por detrs mientras pona sus brazos
alrededor de ella, mirando por encima de su hombro.
Qu ves?
Una mujer distinta respondi Lauren con calma.
Elliott frunci el ceo. Me gustaba tal como era.
Lauren mir profundamente a los ojos de color marrn en el
espejo. Creo que que te gustar mas esta. Se dio la vuelta en los
brazos de Elliott y la bes.
Despus de un momento Elliott se apart y le pregunt: Lo
Julie Cannon
prometes?
Voy a hacer mi mejor esfuerzo.
Bueno, ya sabes la nica manera de ser bueno en algo es la
prctica, prctica, prctica. Mientras deca cada una de las tres
ltimas palabras, inclin la cabeza y bes suavemente a Lauren.
Sus besos se inflamaron de deseo una vez ms y Lauren sinti
que la estaban levantando. Lo siguiente que supo, fue a segundos
del orgasmo mientras la boca de Elliott haca su magia. Oh,
Dios, Elliott, -exclam mientras estallaban cohetes detrs de sus
prpados cerrados.
Le tom varios minutos comprender lo que haba pasado, y
mientras Elliott la alejaba suavemente de la mesada del bao,
Lauren fluy en sus brazos. Movi sus manos hacia abajo por la
espalda de Elliott y le tom el trasero. Mientras lo apretaba, le gru,
Estoy definitivamente despierta ahora, y empuj a Elliott de nuevo
al dormitorio.
Una hora ms tarde, tumbada cmodamente en los brazos de
Elliott, Lauren dijo: Ahora necesito caf.
Elliott se quej con fingida decepcin y mir hacia abajo la
suave carne bronceada de la mujer en sus brazos. A regaadientes se
levant de la cama. Por mucho que odie ocultar este hermoso cuerpo,
no confo en m misma. Le entreg a Lauren una tnica del armario y
se puso un par de calzoncillos y una vieja camiseta. Besndola una
vez ms, tom su mano y la llev a la cocina.
Lauren sonri con timidez cuando Elliott se inclin hacia delante
a travs de la mesada mientras tomaba un sorbo de caf unos minutos
ms tarde y le dijo: A riesgo de repetirme a m misma, eres tan
hermosa.
Lauren se ruboriz. Repentinamente me siento tmida y no
tengo ni idea de por qu. Hizo una pausa. Es un poco tonto despus
de lo que hicimos durante toda la noche.
Elliott se inclin sobre la mesa y le tom la mano. No es tonto
en absoluto. De hecho, creo que es bastante encantador. Es refrescante
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Julie Cannon
*
Qu ests haciendo? Elliott dej caer su maletn en sus
escritorio y se sent con su telfono celular acunado en su odo.
El corazn de Lauren se aceler con el sonido ronco de la voz en
el otro extremo de la lnea. Estoy recostada aqu, en tu cama,
pensando en ti. Haba visto a Elliott vestirse para su da en la oficina
y haba disfrutado profundamente atestiguar la transformacin de
amante apasionada a respetada mujer de negocios. En realidad, cuanto
ms pensaba en ello, ms excitada se pona.
En serio? Elliott se recost en su silla, sosteniendo el telfono
como si fuera Lauren.
S, en serio. Qu ests haciendo t?
Elliott sacudi la cabeza y sonri. Pensando en ti. Un calor se
difundi a travs de su cuerpo con el pensamiento.
Lauren se recost en la almohada que Elliott haba utilizado las
pocas horas que durmi. Tu probablemente sabes esto, pero eres una
amante increble.
Oh, Dios mo. El calor se haba instalado en el lugar directamente
entre sus piernas que estaba sobre-calentado ya. No deberas decir
cosas como esa.
Por qu no? pregunt Lauren.
Permtanme expresarlo de otro modo. No deberas decir cosas
como esa cuando tengo que pasar el resto del da en una reunin de
Julie Cannon
*
Elliott fue una ejecutiva de exitosa el resto del da, pero no pudo
concentrarse por completo hasta que toc el timbre de Lauren esa
noche.
Lauren estaba de pie en la puerta usando un suter de cachemira
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y unos jeans. Tena el pelo suelto y sus pies estaban desnudos. Dios,
se ve hermosa.
Hola. Pasa As puedo tomarte aqu mismo, en el piso del estar.
Hola a ti. Elliott cruz el umbral y se volvi para hacer frente a
Lauren cuando cerr la puerta. Lo que ella tena la intencin de que
fuera un simple beso de saludo rpidamente explot en el fuego del
deseo cuando Lauren respondi con varios de los suyos.
Creo que llevas demasiada ropa, dijo Lauren, sosteniendo la
chaqueta del traje de negocios que le quedaba a Elliott tan bien.
Entonces tal vez deberas hacer algo al respecto.
Habiendo recibido rienda suelta, Lauren desliz sus manos bajo
las solapas de la chaqueta, rozando suavemente los pezones
endurecidos de Elliott mientras empujaba la chaqueta de sus hombros
y la dejaba caer en el piso. Lauren tir la camisa de seda de la
cinturilla de los pantalones entallados de Elliott. Manos ansiosas se
encontraron con la piel al mismo tiempo, y su pasin explot.
Elliott se apart por un instante para sacar el suter por sobre la
cabeza de Lauren para tener acceso sin trabas a los senos que haban
llenado su mente todo el da. Se estremeci cuando Lauren pas sus
uas hacia arriba y hacia abajo por su espalda y luego se movi
rpidamente para desabrochar su cinturn. Al sonido de la cremallera
siendo derribada, Elliott desliz su mano en la cintura de los
pantalones de Lauren y se encontr con la clida humedad. No pudo
detenerse cuando sus dedos se deslizaron sobre la carne hinchada y
sinti que las piernas de Lauren comenzaban a doblarse.
Oh, Dios, Elliott, no te detengas.
Lauren estaba sin aliento por el deseo, y Elliott no estaba segura
de poder detenerse si tena que hacerlo. Movi hbilmente sus dedos y
Lauren abandon la cremallera de Elliott para poner los brazos
alrededor de su cuello, atrayndola ms cerca. Elliott poda sentir la
respiracin irregular de Lauren en su odo mientras se acercaba a la
liberacin final. Su pasin estaba llevando a Elliott hasta el punto del
clmax, pero empuj los pensamientos de su propia satisfaccin de su
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Recustate y te lo mostrar.
La promesa en la voz de Lauren hizo a Elliott murmurar, Dios
dame fuerza.
Dios le dio fuerza a Elliott, y fue varias horas despus cuando fue
capaz de recuperar el aliento. Ests segura de que no habas hecho
esto antes?
Lauren lentamente serpenteaba con sus dedos en el pecho y
el vientre de Elliott antes de dar vueltas alrededor de su ombligo.
Qu cosa quieres decir? -pregunt con un acento sureo exagerado.
Elliott se ech a rer y se agach para detener la mano que la
estaba atormentando de nuevo. Sabes lo que quiero decir.
Bien no era una palabra lo suficientemente fuerte para describir
cmo hacan el amor, y como para demostrarlo, se acercaron de
nuevo. Lauren estaba en todas partes. Sus manos exploraban
continuamente y su boca nunca dej de mordisquear y succionar en
los lugares que volvan loca de deseo a Elliott. Cuanto ms Elliott
responda, ms excitada se pona Lauren. Finalmente, despus de lo
que pareci una eternidad, Lauren se pos en el lugar en donde Elliott
la necesitaba ms. No pas mucho tiempo antes de que supiera cun
desesperada estaba Elliott por su lengua, y la sostuvo con fuerza,
mientras Elliott elevaba el cuerpo para llegar al clmax.
Creo que tu lo dijiste mas temprano, Elliott. Lauren sonri con
el pensamiento. Soy tan buena como la mujer con la que estoy, por lo
que debe ser todo tu culpa. Ella retir su mano de la de Elliott y la
desliz en los rizos hmedos y tibios entre las piernas de Elliott.
Elliott salt con el contacto inesperado. Whoa, Tengo que
descansar un minuto. Quit la mano de su sensible cltoris. Eres
como un nio en una tienda de dulces.
La broma hizo rer Lauren y acurrucarse cerca. Y creo que he
desarrollado un preocupante gusto por lo dulce.
Luchando contra la lasitud del buen sexo, Elliott se agach y
tir de la sbana para cubrirse las dos. Dichosa de mi, fue lo ltimo
que dijo antes de quedarse dormida.
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*
Lauren se despert con el canto de los pjaros fuera de la ventana
de su habitacin y el sonido de una cortadora de csped al otro lado de
la calle. Estaban acostadas de lado una frente a la otra, y aprovech la
oportunidad para estudiar a la mujer que segua durmiendo
plcidamente a su lado. Elliott se vea en paz. Las lneas de tensin se
haban suavizado y el pelo alborotado la haca parecer varios aos ms
joven. Eres tan maravillosa. Qu est pasando aqu? Su mirada se
traslad a las manos que le haban dado placer durante toda la noche,
y su cuerpo empez a sentir un hormigueo ante el recuerdo.
Reflexion acerca del tiempo que pasaron juntas en la agona de la
pasin y no poda haber imaginado que poda sentir tanto placer en
una funcin bsica del cuerpo. Ahora saba lo que la frase quera decir:
las mujeres hacen el amor con el cerebro ms que con sus cuerpos. Su
relacin con Elliott era inconfundible, y el deseo de besarla era
abrumador.
Tu has tenido suficiente descanso, susurr Lauren mientras
Elliott comenzaba a responder a sus besos.
Mmm. Qu hora es?
Es hora de volver a hacerlo. Lauren tom un pezn rosado en
su boca.
Oh, Dios, grit Elliott cundo Lauren mordi ligeramente en la
pico duro. Se haba despertado completamente excitada y saba que no
llevara mucho tiempo antes de que fuera incapaz de pensar con
coherencia. Rpidamente se apoder de la ofensiva, rod a Lauren
sobre su espalda. Oh, no, tu no, dijo, a caballo entre sus muslos,
sosteniendo las manos de Lauren sobre su cabeza. Es mi turno.
La mirada posesiva en los ojos de Elliott hizo que la boca de
Lauren se secara. Dios mo, yo te deseo tanto. Es siempre as?
pregunt.
As cmo? Le pregunt Elliott, ya bajando su cabeza para
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besarla.
No siendo capaz de tener lo suficiente la una de la otra. Lauren
intent mover sus manos, pero Elliott las sostena firme.
Ella se inclin y susurr al odo de Lauren, Voltate
La sangre de Lauren corri travs de su cuerpo en un
nanosegundo, y la aprehensin comenz a extenderse sobre su
columna vertebral. Por qu?
Confas en m?
S.
Entonces, voltate. No voy a hacerte dao.
Con la ayuda de Elliott, Lauren se volte sobre su estmago.
Su excitacin se dispar cuando sinti el peso Elliott asentarse sobre
ella. Los rizos suaves le hacan cosquillas en el trasero y los pezones
que presionaban contra su espalda estaban duros como rocas. Elliott
empez a moverse lentamente hacia arriba y abajo sobre su cuerpo,
haciendo que Lauren se retorciera en la cama. Elliott movi la mano
por debajo de Lauren y de inmediato encontr el lugar que estaba
buscando.
Lauren gimi de placer cuando Elliott comenz las rtmicas
caricias que ella necesitaba. Su cuerpo se arque con cada embestida
audaz, y la sensacin de los dedos de Elliott sobre su cltoris y su
cuerpo prensado contra su espalda la condujeron rpidamente al
orgasmo. Mientras ella bajaba poda sentir a Elliott movindose contra
ella con ms urgencia que antes. Lauren arque su espalda para que su
trasero quedara en contacto directo con las embestidas de la pelvis de
Elliott, y despus de unos momentos, Elliott se vino y se desplom
sobre su espalda. Al escuchar su respiracin entrecortada, Lauren
se deleit en el conocimiento de que poda dar el mismo placer a
Elliott.
Suspirando por algo de aire Elliott respondi la pregunta original
de Lauren. Con la persona adecuada, s. Es siempre es as.
Y yo soy la persona adecuada para ti, Elliott?
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Captulo Diecisis
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Lauren estaba furiosa. Acababa de argumentar con xito ante la
SEC para que dimitiera los cargos contra Bradley & Taylor. Aunque
ambos hombres deberan haber estado extasiados con el giro de los
acontecimientos, haban estado extraamente apagados en el vuelo de
regreso, y ahora estaban tratndola como al enemigo.
Charles estaba sentado detrs de su escritorio y Thomas Merison
estaba sentado en la silla a su izquierda. El escritorio de Charles
estaba despejado a excepcin de una carpeta manila. l prefera tener
las reuniones y conversaciones en su mesa de conferencias o en la
pequea zona de descanso junto a la ventana. El hecho de que
estuviera del otro lado del masizo escritorio sealaba que esto era
grave y que la involucraba.
Lauren, por favor, ven y sintate. No hubo informalidad
en su voz.
Merison casi se regode mientras se sentaba en la silla contigua.
Lauren, algo ha llegado a mi conocimiento y estoy muy
perturbado por ello.
El estmago de Lauren se encogi pero no dijo nada.
He recibido unas fotografas que son, por as decirlo, no
apropiadas para la imagen que mantenemos aqu en Bradley & Taylor.
Estoy decepcionado de ti, Lauren. La empresa tena grandes
expectativas en ti, pero parece que nuestra confianza estaba en el lugar
equivocado.
Fotografas? Puedo verlas, Charles? Lauren no tena ni idea
lo que iba a ver cuando abriera la carpeta, pero no estaba dispuesta a
retractarse de lo que fuera. Se sinti aliviada de que sus manos
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Julie Cannon
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Ests absolutamente segura acerca de esto? Le pregunt
Elliott a Teresa.
Las encontr por casualidad. Estaba buscando el archivo
Colchester. Mark tiende a ser un vago, as que estaba revisando su
escritorio, y... ah estaban, tapadas bajo algunos papeles en el cajn de
abajo.
En una carpeta con la tarjeta de visita de un investigador
privado?
Hubiera tomado la carpeta, pero l simplemente poda negarlo a
continuacin y actuar como si le hubieran tendido una trampa.
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Captulo Diecisiete
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cuando el obturador hizo clic. Tal vez pensaron que estaban siendo
discretas, pero su conexin era evidente.
No quiero que contines siendo lastimada por nuestra relacin.
Me va a matar si la terminamos. Pero lo har por ti.
No puedes hablar en serio dijo Lauren con incredulidad. El
pnico inundaba su cuerpo.
Si, lo hago.
Bueno, creo que ests jodida si crees que voy dejar de verte
debido a esto Lauren comenz a caminar por la habitacin. Te amo,
Elliott Foster, y, maldita sea, nadie va a interponerse entre nosotras,
especialmente algunos imbciles como Charles Comstock. Lauren se
detuvo cuando se dio cuenta de lo que haba dicho.
Elliott tom la primera respiracin profunda en varios minutos.
Qu dijiste?
Lauren se acerc y se arrodill delante de ella. Dije que estas
jodida.
Eso es bastante evidente, pero yo me refera a la otra parte.
La parte sobre el imbcil de Comstock o el hecho de que Te
Amo? dijo Lauren con todo el amor que senta brotando de ella
.
El corazn de Elliott comenz a cantar. Trat de hablar pero su
garganta estaba tan insoportablemente apretada que todo lo que poda
hacer era hacer un pequeo sonido quejumbroso.
Te amo, Elliott. I no quiero dejar de verte. Quiero pasar el resto
de mi vida contigo. Tom la cara de Elliott entre sus manos y la mir
a los ojos con tanta pasin y anhelo, que Elliott no poda respirar. Su
expresin se torn grave. Por favor... no uses esto como una excusa
para huir de m.
Las palabras dieron en el blanco con una fuerza mucho mayor
que la suave entrega que Lauren haba elegido. Sacudida hasta la
mdula, reconociendo que Lauren haba cortado derecho a la verdad,
Elliott dijo, No puedo huir de ti Te amo demasiado, Lauren. T eres
todo para m, y me est matando ver que esto te suceda. No puedo
soportar que, debido a mi, has sido tratada de esta manera.
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Captulo Dieciocho
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FIN