CitricosCultivoPoscosechaeIndustrializacion PDF

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 374

Citrus: Growing, Postharvest and Industrialization.

Lasallian Research and Science Series

CTRICOS: CULTIVO,

POSCOSECHA E INDUSTRIALIZACIN
Serie Lasallista Investigacin y Ciencia

Financiado por el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural y con la participacin de Corpoica C.I. La Selva, la Universidad de Antioquia, Agrcolas Unidas y Emcoldi Ltda. En el marco del Programa de investigacin y desarrollo tecnolgico titulado Generacin de valor
agregado en el marco de los acuerdos de competitividad de la cadena citrcola colombiana.

/1/

634.3
C890 Ctricos: cultivo, poscosecha e industrializacin. Caldas: Corporacin

Universitaria Lasallista, 2012.


367 p. : il. (Serie Lasallista Investigacin y Ciencia).
ISBN: 978-958-8406-17-6
Derechos reservados conforme a la ley
1. CITRICOS 2. CULTIVO 3. PLAGA 4. AGROINDUSTRIA

De los captulos: las opiniones, conceptos, tablas, grficas,

ilustraciones y fotografas que hacen parte de cada uno de


los captulos, son responsabilidad exclusiva de los autores.

Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural


Juan Camilo Restrepo Salazar, Ministro.

Corpoica

Juan Lucas Restrepo Ibiza, Director Ejecutivo.


Rubn Alfredo Valencia Ramrez, Director de Investigacin y Transferencia Tecnolgica.

Universidad de Antioquia
Alberto Uribe Correa, Rector.

Corporacin Universitaria Lasallista


J. Eduardo Murillo Bocanegra, Ph.D., Rector.

Editor / Editor
Luis Fernando Garcs Giraldo, DSc., Corporacin Universitaria Lasallista

Editora acadmica / Academic editor


Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Ph.D. Corpoica.

Comit Editorial / Editorial Board

Alejandra Salvador Prez, Ph.D. Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA). Espaa.
Lluis Palou Vall, Ph.D. Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA). Espaa.
Amilcar Manuel Marreiros Duarte, Ph.D. Universidade do Algarve. Portugal.
Carla Nunes, Ph.D. Universidade do Algarve. Portugal.
Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Ph.D. Corporacin Colombiana de Investigacin Agropecuaria (Corpoica). Colombia.
Csar Cardona, Ph.D. International Center for Tropical Agriculture (CIAT). Colombia.
Pedro Francisco Aguilar Nio, Pontificia Universidad Javeriana. Colombia.
Edison Javier Osorio Durango, Ph.D. Universidad de Antioquia. Colombia.
Julin Alberto Londoo Londoo, Ph.D. Corporacin Universitaria Lasallista. Colombia.
Luis Fernando Garcs Giraldo, DSc. Corporacin Universitaria Lasallista. Colombia.
Margarita Mara Jaramillo Zapara, Mg. Corporacin Universitaria Lasallista. Colombia.

Correctora de texto / Proofreader


Lorenza Correa Restrepo

Traductor /Translator
Juan David Tous Ramrez

Apoyo Editorial / Editorial assistance


Jovany Arley Seplveda Aguirre

Diagramacin e impresin / Layout and printing


Editorial Artes y Letras S.A.S.
e-mail: [email protected]
PBX (57-4) 372 77 16
Itag, Colombia

Fecha de edicin: 30 de abril de 2012


Edicin 300 ejemplares

/2/

Tabla de contenido
Table of contents

PRLOGO / FOREWORD
5

Edison Javier Osorio Durango


Captulo 1 / Chapter 1

Situacin actual de la cadena de ctricos en Colombia:


limitantes y perspectivas
Current situation of the citruss production chain in Colombia:
limitations and perspectives
7

Pedro F. Aguilar Nio, Manuel Jos Escobar Quijano, Catarina Pedro Pssaro Carvalho
Captulo 2 / Chapter 2

Generalidades de los ctricos y recomendaciones agronmicas


para su cultivo en Colombia
Overview to citrus and agronomic recommendations
for cultivating these products in Colombia
49

Javier Orlando Orduz-Rodrguez, Diana M. Mateus Cagua


Captulo 3 / Chapter 3

Fisiologa de la floracin y fructificacin en los ctricos


Physiology of citrus flowering and fruiting
89

Alexander Rebolledo Roa


Captulo 4 / Chapter 4

La Ecofisiologa de los Ctricos en el Trpico:


El Caso del Piedemonte Llanero de Colombia
Citrus ecophysiology in the tropic:
The case of Colombian plain regions foothill.
107 Javier Orlando Ordz - Rodrguez

/3/

Captulo 5 / Chapter 5

Insectos de los ctricos


Insects of citrus
129 Guillermo Len M.
Captulo 6 / Chapter 6

caros que afectan la calidad del fruto de los ctricos en Colombia


Mites that affect the fruits quality in Colombian citrus
163 Nora Cristina Mesa Cobo, Isaura Viviana Rodrguez Torres
Captulo 7 / Chapter 7

Los insectos escama asociados a los ctricos, con nfasis en Praelongorthezia


praelonga (Douglas) (Hemiptera: Coccoidea: Ortheziidae)
The scale insects associated with citrus, with emphasis on Praelongorthezia
praelonga (Douglas) (Hemiptera: Coccoidea: Ortheziidae)
173 Demian Takumasa Kondo, Ana Lucia Peronti, Ferenc Kozr va Szita
Captulo 8 / Chapter 8

La normativa y los estndares de calidad como garanta de competitividad


Regulation and quality standards as a competitiveness guarantee
191 Sandra Milena Vsquez Meja, Claudio Jimnez Cartagena
Captulo 9 / Chapter 9

Poscosecha
Postharvest
223 Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador
Captulo 10 / Chapter 10

Control de enfermedades de poscosecha


Postharvest diseases control
285 Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Carla Nunes, Llus Palou
Captulo 11/ Chapter 11

Industrializacin de ctricos y valor agregado


Citrus industrialization and added value
307 Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Julin Alberto Londoo Londoo
Captulo 12 / Chapter 12

Aprovechamiento de los subproductos citrcolas


The use of citrus sub products
343

Julin Alberto Londoo Londoo, Rafael lvarez, Jelver Sierra,


Ana Mara Restrepo Duque, Catarina Pedro Pssaro Carvalho

/4/

Prlogo
Foreword

Desde el punto de vista geogrfico-regional, diferentes zonas de


Colombia han tenido un gran desarrollo en los ltimos aos en el
cultivo de ctricos como parte de la poltica diversificadora de cultivos tradicionales. Esto se ha logrado gracias, entre otros aspectos,
a las ventajas comparativas del trpico: luminosidad, pluviosidad,
temperaturas y horas de luz, adems de excelentes condiciones
agroecolgicas y de suelos, que posibilitan altos rendimientos por
hectrea, inclusive mayores en comparacin con otras zonas del
mundo, que se caracterizan por el cultivo citrcola. Sin embargo,
a pesar de las ventajas comparativas que ofrecen muchas regiones
del pas, existen an algunos factores que limitan la competitividad del sector, los cuales estn representados fundamentalmente
en la falta de escalas comerciales significativas, la alta dispersin
geogrfica de la produccin, y la falta de gestin empresarial y de
desarrollo tecnolgico. Adems, el eslabn de poscosecha puede
presentar problemas profundos en el desarrollo citrcola, explicado
por deficiente seleccin, clasificacin y almacenamiento; baja calidad externa del fruto; insuficiente tecnologa disponible para mejorar presentacin, as como abundancia en desechos y prdidas.
En este sentido, y como parte de una apuesta al desarrollo de la
cadena citrcola en Colombia, desde hace 4 aos, el Grupo de Investigacin en Sustancias Bioactivas de la Universidad de Antioquia, en asocio con la Corporacin Colombiana de Investigacin
Agropecuaria (CORPOICA) y con C. I. Agrcolas Unidas S. A.,
vienen trabajando en el programa de investigacin: Generacin
de valor agregado en el marco de los acuerdos de competitividad
/5/

de la cadena citrcola colombiana, con el objeto de aportar innovaciones a nuestra agricultura. Para trasmitir los resultados del
programa, se ha elaborado un importante esfuerzo de divulgacin
en el sector citrcola a travs de la organizacin de conferencias,
programas acadmicos en ctricos, participacin en congresos y
publicacin de los resultados ms importantes. No obstante, con
el propsito de aportar un poco ms al desarrollo de la cadena
citrcola, se presenta el libro Ctricos: cultivo, poscosecha e industrializacin. El objetivo principal de este documento es orientar al
sector en los diferentes eslabones de la cadena: cultivo, poscosecha
e industria y entregarle herramientas para mejorar la competitividad del sector.
Los autores de la obra forman un grupo reconocido de investigadores, en el que se conjuga una extensa experiencia profesional
con una formacin actual en el tema citrcola. Esto constituye una
premisa fundamental para convertir el libro Ctricos: cultivo, poscosecha e industrializacin en un instrumento prctico de consulta
y amplia aplicabilidad.

Edison Javier Osorio Durango


Profesor Facultad de Qumica Farmacutica
Grupo de Investigacin en Sustancias Bioactivas - GISB
Universidad de Antioquia

/6/

Captulo 1 / Chapter 1

Situacin actual de la cadena de


ctricos en Colombia: limitantes y
perspectivas
Pedro Aguilar Nio*
Manuel Jos Escobar Quijano**
Catarina Pedro Pssaro Carvalho***

Resumen
En el presente capitulo se muestra el panorama actual
de los ctricos en Colombia, haciendo un breve anlisis de las tendencias recientes del sector citrcola en
el mercado internacional y nacional; se identifican los
principales problemas limitantes del desarrollo y competitividad de la cadena, y se presentan los acuerdos de
competitividad, as como el Plan de Accin Nacional
de la Cadena de Ctricos de Colombia.
Palabras clave: Ctricos, exportacin, competitividad
Current situation of the citruss production
chain in Colombia: limitations and perspectives
Abstract

**

***

Exportador y profesor Pontificia Universidad Javeriana. Bogot -Colombia.


Secretario Tcnico Consejo
Nacional Citrcola.
Corporacin de nvestigacin Agropecuaria CORPOCA. C.. La Selva. Rionegro, Antioquia Colombia.
Correspondencia:
[email protected]

This chapter shows the current outlook of citrus production in Colombia, making a brief analysis of the
sectors most recent trends in international and national markets. The most important problems that limit
the development and competitiveness of the citrus
production chain are described, and so are the competitiveness agreements and the Plan de Accin Nacional
de la Cadena de Ctricos de Colombia (Colombian
National Citrus Chains Action Plan).
Key words: Citrus, exports, competitiveness
/7/

Pedro F. Aguilar Nio, Manuel Jos Escobar Quijano, Catarina Pedro Pssaro Carvalho

ntroduccin
El presente documento, recoge una serie de datos y conceptos sobre la actual situacin productiva (consumo interno y comercio internacional) de los
productos ctricos colombianos y su posicin frente a los pases productores y
exportadores, competidores nuestros en el mercado mundial.
Del anlisis de la informacin suministrada se puede pensar que Colombia, al igual que ocurre con la gran mayora de los productos hortofrutcolas,
ha dejado pasar inmensas oportunidades y no ha aprovechado su riqueza natural de suelos, climas, ausencia de estaciones, entre otras ventajas disponibles,
que le hubieren permitido un posicionamiento importante en este sector a nivel mundial, y generar riqueza y empleo para los colombianos, y en particular
para los campesinos colombianos.
La participacin del pas en el negocio y la industria citrcola, tanto en fresco
como en productos procesados, en el contexto mundial es prcticamente inexistente, y lamentablemente estamos muy atrs de pases similares al nuestro, algunos con inferiores posibilidades de desarrollo de este sector, pero importantes
hoy en la produccin citrcola del continente. Obviamente estamos muy lejos de
Brasil, pero lamentablemente cada da ms lejos de pases como Per y Ecuador,
solo para mencionar estos dos compaeros de negociacin con Estados Unidos.
Las regiones productoras de ctricos en Colombia se encuentran en una
etapa muy incipiente de desarrollo que limita la posibilidad de competir con
otros orgenes en Amrica Latina. El pas posee condiciones propicias para el
establecimiento de una industria competitiva pero tiene una limitada capacidad de generacin de volumen constante, de ofrecer las variedades requeridas
por el mercado y de brindar una oferta de fruta con calidad. Por el contrario
el desarrollo, evolucin y crecimiento del mercado interno colombiano est
permitiendo que la oferta citrcola de pases vecinos vea a Colombia como un
importante mercado de destino para su produccin exportadora.

Visin de la cadena de ctricos en Colombia


Colombia es un actor marginal como productor de ctricos en el mundo, aunque
su participacin muestra una dinmica interesante en el contexto internacional.
El comercio mundial de ctricos en fresco es bajo como proporcin de la produccin, revelando un alto consumo interno en los pases productores, al igual que
de procesamiento agroindustrial que se destina para abastecer tanto la demanda
interna como la de los mercados internacionales de ctricos procesados.
/8/

Situacin actual de la cadena de ctricos en Colombia: limitantes y perspectivas

Aunque el rengln citrcola ha ganado en forma dinmica participacin en


el sector agrcola total colombiano, las importaciones totales de la cadena han
crecido en forma acelerada, mientras que las exportaciones decrecen, manteniendo la balanza comercial de este rengln en forma deficitaria.
De hecho, a pesar de las ventajas comparativas que ofrecen muchas regiones del pas para el desarrollo citrcola, existen an algunos factores que
limitan la competitividad del sector, tales como la falta de escalas comerciales
significativas (generacin de volumen de oferta constante), la alta dispersin
geogrfica de la produccin, la falta de gestin empresarial y un pobre desarrollo tecnolgico. Igualmente, el pas enfrenta problemas para incursionar en
los mercados externos debido a que, entre otros factores, no se cuenta con las
variedades ni calidades adecuadas, no hay continuidad en la oferta exportable
e igualmente se deben superar problemas de empaque y presentaciones, as
como barreras tcnicas y fitosanitarias.
De otro lado, la agroindustria nacional de ctricos muestra un significativo, aunque muy pequeo desarrollo en los ltimos aos. No obstante la
expansin del mercado de procesados de frutas, especialmente de la industria
de zumos que ha tenido un gran dinamismo en los ltimos aos, el sector en
Colombia enfrenta problemas con el suministro de materia prima que no se
ajusta a sus requerimientos, ni en calidad, ni en precios, y que adems enfrenta problemas de localizacin, suplindose en gran parte con materia prima
importada.
Las principales debilidades que enfrenta la cadena son la falta de escalas
comerciales significativas y la alta dispersin en la produccin, el bajo grado
de asociatividad entre los productores y la falta de cultura agro empresarial
que limita su acceso al crdito y a la asistencia tcnica, y adems restringe su
capacidad de maniobra frente a otros actores; existe poco grado de integracin
entre la industria y la agricultura; no hay disponibilidad de material vegetal
certificado; falta investigacin y transferencia de tecnologa en la fase agrcola
y agroindustrial, as como la implementacin de campaas de prevencin de
plagas y enfermedades.
El desarrollo futuro del sector est en la especializacin de la oferta regional siguiendo el patrn de ventajas comparativas y competitivas a manera de
clusters, para as desarrollar nichos productivos con vocacin exportadora. De
igual forma, el desarrollo de la capacidad exportadora ser fundamental para
el sector y solo se dar sobre la base de un complejo agroindustrial organizado
y una estructura empresarial eficiente.
/9/

Pedro F. Aguilar Nio, Manuel Jos Escobar Quijano, Catarina Pedro Pssaro Carvalho

Panorama actual
Ctricos
Los ctricos son cultivos permanentes y en general tienen alta adaptabilidad
a diversas condiciones climticas, facilitando su cultivo en un gran nmero de
pases, aunque las regiones productores por excelencia han sido localizadas en
el continente americano y en el occidente del continente europeo1.

La importancia de estas frutas radica en su alto contenido de antioxidantes,


sustancias capaces de bloquear el dao de los radicales libres (como la contaminacin, el tabaco, entre otros), evitar el envejecimiento prematuro del organismo
y prevenir enfermedades crnicas y degenerativas como el cncer. De la misma
forma, se destacan por su aporte de vitamina C, la cual no es almacenada por el
cuerpo, as, que es necesario obtenerla a travs del consumo diario de este tipo de
frutas. Esta vitamina hidrosoluble favorece la reparacin de los tejidos, promueve
la cicatrizacin, fortalece los vasos sanguneos y mantiene huesos, encas y dientes
sanos. Son excelentes aliadas del sistema respiratorio, porque aumentan las defensas, alivian las molestias de resfriados, gripes, dolor de garganta y muscular, y
tienen accin antiviral y antibacteriana. La fibra es otro nutriente presente en los
ctricos; sta, limpia el tracto digestivo, desecha grasas y toxinas, y brinda sensacin de saciedad, contribuyendo a comer menos y evitar subir de peso2.
El rengln de los ctricos es de un gran dinamismo a nivel mundial, no solamente
para sus productos frescos sino igual para los procesados industrialmente. La demanda mundial es muy importante, con unos proveedores como Brasil, Estados Unidos
y Espaa, que sobresalen ampliamente sobre los dems pases productores. En general en nuestro pas las Regiones Productoras, no tienen registros de produccin,
y mucho menos generacin de exportaciones, que lo destaquen en este rengln; a
nivel nacional nuestras regiones son pobres en participacin; no obstante poseer muchas de las condiciones requeridas para la produccin en condiciones competitivas.
Situacin Mundial

Los pases del hemisferio Norte son los mayores productores de ctricos, con
el 58% de la produccin mundial, siendo el restante proveniente de los pases
del hemisferio Sur, donde el grueso de la produccin se concentra en 5 pases3.
La produccin de ctricos en 2010 fue liderada por China, Brasil y Estados Unidos. Brasil y Estados Unidos siguen siendo las dos ms grandes regiones procesadoras de naranja en el mundo4. China es el mayor productor a nivel mundial de
mandarinas y clementinas, seguido a larga distancia por Espaa. India, Mxico
y Argentina son los mayores productores de limn y lima5.
/ 10 /

Situacin actual de la cadena de ctricos en Colombia: limitantes y perspectivas

La produccin y consumo mundial de ctricos ha pasado por un perodo de


enorme crecimiento, a partir de la segunda mitad de los ochenta. La produccin
de naranjas, tangerinas, limones y limas se ha expandido rpidamente. Niveles
ms altos de produccin han permitido a su vez mayores niveles de consumo total
y por cpita de ctricos. Incluso ha sido posible que un crecimiento ms rpido
en el rea de productos ctricos procesados tuviera lugar, gracias a las mejoras en
el transporte y empaque, donde se han reducido los costos y mejorado la calidad.
No obstante, una rpida expansin de la productividad, el crecimiento
ms lento de la demanda por algunos productos ctricos han resultado en
precios ms bajos tanto para los productos frescos como para los procesados,
especialmente a nivel del productor. Como resultado de ello, se ha reducido
la siembra de nuevas plntulas o semilleros. Por lo tanto, se prev que los porcentajes de crecimiento de la produccin y del consumo proyectados para los
prximos diez aos sern ms bajos que los de la dcada pasada.
En un informe sobre el comercio de ctricos, la Secretaria de Agricultura de
Estados Unidos (USDA) estima que el comercio mundial de ctricos crecera
un 7% el 2011. La produccin global de naranjas para la campaa 2010/2011
ascender a 51,4 millones de toneladas, en tanto que el comercio mundial
mover casi 4 millones de toneladas.
Con respecto del sector del zumo de naranja, este avanza con una produccin global de 2,2 millones de toneladas, lo que representa un incremento del
12% respecto de la anterior campaa.
Las exportaciones procedentes de Brasil -primer productor de zumo de naranja
del mundo- se incrementarn un 5% esta temporada, mientras que en EEUU
subirn un 8%. Estos ascensos, segn el USDA, se deben principalmente a la
fuerte demanda del rea de pases de la Unin Europea, en donde la demanda del
consumo moderno est ms orientada al zumo de naranja envasado que al fresco.
En la UE, segn resalta el informe, el zumo de naranja es la bebida ms
popular dentro del segmento general de zumos y de bebidas no alcohlicas3, 4.
En cuanto a las previsiones para mandarinas, apunta que la produccin
mundial prevista es de 20,3 millones de toneladas, un 14% inferior a la de
la anterior campaa, lo que se explica en los descensos de aforos en China y
en Corea del Sur. El comercio de mandarinas, por su parte, se elevar a 2,1
millones de toneladas, un 3% ms que en la temporada anterior, y las exportaciones de la UE se incrementarn debido a la mayor cantidad de fruta y a la
fuerte demanda rusa.
/ 11 /

Pedro F. Aguilar Nio, Manuel Jos Escobar Quijano, Catarina Pedro Pssaro Carvalho

Adems, la produccin estadounidense tambin se mantendr al alza impulsada por la demanda firme de su mercado interno y por la dinmica de sus
exportaciones, especialmente a Canad y Japn
Para el USDA, la caracterstica de fciles de pelar (categora comercial
de easy peelers) de las diversas variedades de mandarinas disponibles en el
comercio se ajustan mejor a los hbitos modernos de consumo.
Respecto de la evolucin durante la campaa de la produccin de pomelo,
este organismo seala que la produccin global ser de 5,2 millones de toneladas, un 5% inferior a la de la temporada anterior, debido al descenso de la
cosecha en China. El comercio mundial durante la campaa 2010/2011 se
estima en 865.000 toneladas, impulsado por la fortaleza de la demanda de
este ctrico en la UE, Japn y Rusia.
Sobre las perspectivas para el cultivo y comercio del limn, el USDA apunta
que la produccin mundial ser de 6,3 millones de toneladas, un 7% ms que en
la anterior temporada, con la Argentina y Estados Unidos como principales pases6.
En la tabla 1 se muestran los precios alcanzados en el mercado de Estados Unidos de las diferentes especies de ctricos para el mes de noviembre de
2011, donde se puede observar que las especies ms cotizadas en este mercado
son el pomelo, las mandarinas y la naranja. En el caso particular de las limas,
el precio a nivel detallista es igualmente importante ya que sobrepasa US$1
por libra, ctrico que representa verdaderas oportunidades comerciales para
Colombia en el corto plazo al ser el nico ctrico de Colombia admisible al
mercado USA sin tratamiento cuarentenario7.
Tabla 1. Precios de venta al por menor en
Estados Unidos para ctricos en 2011.
Especie / Variedad

Precio (USD$ / libra)

Naranja Navel

0,95

Naranja Valencia

0,79-1,38

Mandarina

1,28

Pomelo

1,57-2,27

Limn

0,69

Lima

0,24 (precio de la unidad)

Fuente: United States Department of Agriculture


- Agricultural Marketing Service8

/ 12 /

Situacin actual de la cadena de ctricos en Colombia: limitantes y perspectivas

En Francia se registraron en la campaa de 2007-2008 precios de importacin para ctricos en fresco de 0,72 euros / Kg para naranjas, 0,95 euros / Kg
para clementinas, 0,84 euros / Kg para pomelo, y 1,35 euros / Kg para limn;
siendo el limn y las clementinas las especies ms cotizadas. El limn goz de
un aumento del 68% en esta campaa, mientras que para las dems especies
el precio promedio se ha mantenido ms o menos estable desde el ao 2000
(0,84 euros / Kg para pomelo; 0,67 euros / Kg para limn; 0,81 euros / Kg
para clementinas; 0,62 euros / Kg para naranjas)9.
Holanda ofrece buenas oportunidades para los proveedores de limas frescas. Es el ms grande centro de comercio e importador directo de los pases
en desarrollo (PD) en la Unin Europea. El mercado holands de limas representa el 38% del volumen total de importaciones de la U.E, y el 68% del
volumen de importaciones de los PD. Los principales pases abastecedores del
mercado europeo de limas son Brasil (71%) y Mjxico (26%).
Las pocas ms importantes de comercializacin de lima en Europa son
mayo-septiembre y diciembre.
Las importaciones de esta fruta crecieron el 13% entre 2004 y 2009. En
2009 se import 50 mil toneladas de limas, o sea 41 millones de euros, siendo
el 95,1% de este volumen proveniente de los PD. Solo en 2008, en Holanda
se consumieron 37 mil toneladas de limones y limas frescas, ocupando el
puesto siete en Europa representado por el 0,3% del consumo total de U.E.,
por debajo de Portugal que representa el 1,0% del consumo. El consumo en
Europa de esta fruta creci el 28% por ao entre 2004 y 200810.
Las limas son frutos ctricos cidos que difieren de las otras variedades de
ctricos, dado que por lo general no se consumen de forma directa. En Holanda
se consumen principalmente en asociacin con otros alimentos y para dar sabor
extra o en bebidas. Su cscara rallada tambin se utiliza para aromatizantes.
Se espera que el consumo y la importacin de limas crezca en los prximos aos,
sobretodo debido a dos razones: los beneficios de salud de las limas (por ejemplo,
prdida de peso, cuidado de la piel, una buena digestin, entre otros) son cada vez
ms conocido en Holanda y una mayor demanda de bebidas a base de limas.
La sostenibilidad se ha convertido en un tema importante para el mercado
de limas. Las limas orgnicas o de mercados justos (Fair trade) cada vez
se venden mas en los mercados minoristas. Por ejemplo, las limas orgnicas
mejicanas Don Limon han sido introducidas recientemente en el mercado
holands. Esta marca de limas que se comercializa como complemento para
/ 13 /

Pedro F. Aguilar Nio, Manuel Jos Escobar Quijano, Catarina Pedro Pssaro Carvalho

bebidas alcohlicas podra despegar en el negocio de catering holands. Para


ms informacin consultar la web: http://www.don-limon.de
El precio FOT de la lima Tahit en Rotterdam paso de 4,86 euros / 4 Kg
Categ. I en 2006 a 5,61 en 2010, lo que demuestra lo interesante que puede
ser este producto para Colombia10.
Holanda esta entre los pases mas dispuestos a pagar por limas orgnicas
certificadas. Las limas orgnicas pueden comercializarse a precios un 10-30%
superiores a las limas convencionales (tabla 2). Hay una tendencia en el mercado hacia las limas certificadas en comercio justo as como orgnicas, estando
el consumidor dispuesto a pagar un plus por ello.
Tabla 2. Precios para el mercado justo de limas 2010.

Convencional

Brasil

Precio por min.


/ Kg (USD$)
0,49

Convencional

Caribe

1,16

Orgnico

1,51

Convencional

Caribe
Republica
Dominicana
Egipto

Orgnico

Egitpo

0,43

Tipo de lima

Orgnico

Pas

1,51
0,33

Fuente: Fairtrade Labelling Organisation citado por CBI10.

Los requerimientos no-legislativos son cada vez mas estrictos con respecto a
las limas. Es muy importante que la empresa est certificada en GlobalGAP y/o
HACCP para abastecer cadenas de mayoristas, mientras que para el marcado
minorista las exigencias no-legislativas no son tan altas, pero lgicamente hay
que contar con las barreras legales. Resulta de particular importancia atender las
polticas relacionadas con los lmites mximos de residualidad (MRLs).
El comercio de limas no est dominado por grandes empresas multinacionales como lo es para otras frutas tropicales, como el banano o la pia; estando por lo tanto, ms abierto a nuevos proveedores. Las limas son importados
en Holanda en su mayora por importadores independientes, algunos de estos
especializados en frutas exticas.
Los importadores especializados son los mejores socios de negocios para
los exportadores de PD. Es ms aconsejable para estos pases buscar un im/ 14 /

Situacin actual de la cadena de ctricos en Colombia: limitantes y perspectivas

portador que abastece supermercados, mayoristas, fruteras o en el sector de la


restauracin, y que se ocupa en pequeas cantidades y esta interesado en los
nuevos proveedores.
t
t
t
t

Algunos de los compradores holandeses ms importantes son:


Roveg - http://www.roveg.nl importante proveedor de diferentes frutos
y vegetales, incluyendo limas.
Natures pride - http://www.naturespride.eu importante importador de limas.
The Greenery - http://www.thegreenery.com/home - importante importador de limas.
Eosta - http://www.eosta.com importador de limas con sello de comercio justo y orgnicas.

Aunque hay un gran nmero de jugadores activos en el mercado de las


limas, tambin hay posibilidades en los segmentos del mercado ms pequeos
(tnicos). Las tiendas tnicas conviven junto a los grandes comerciantes y
usan su propia comunidad para suministrar producto (a menudo productos
diferentes o sin marca) directamente desde su pas de origen; por ejemplo las
comunidades Africanas, a menudo de ultramar. A pesar de que el mercado
es ms pequeo puede ser un canal comercial ms fcil, ya que habr menos
barreras culturales entre los PD y el comprador de la UE.
En general, los ctricos en fresco siguen presentando precios muy superiores en el mercado con respecto a los ctricos procesados, siendo de destacar el
precio de la mandarina en fresco con respecto a las dems especies (tabla 3).
Tabla 3. Precios de retorno en las empacadoras en
Estados Unidos para ctricos en el periodo de 2010-2011.
Especie / Variedad

Naranja Navel

Precio por caja1


(USD$)
Fresco Procesado
13,33

7,21

Naranja Valencia

13,02

9,82

Mandarina

25,81

3,61

Pomelo

12,52

6,23

Tangelos

11,00

7,52

Fuente: USDA/National Agricultural Statistics Service11.


En Estados Unidos se manejan cajas entre 80-95 libras, dependiendo de la especie. Precios de
retorno en las empacadoras.

/ 15 /

Pedro F. Aguilar Nio, Manuel Jos Escobar Quijano, Catarina Pedro Pssaro Carvalho

Con respecto a los procesados de ctricos, es interesante notar que mientras se observ una disminucin promedio de la produccin de zumo concentrado congelado para naranja (-8.4%) y pomelo (-4.7%) entre 2008
y 2011, para mandarina se observ un crecimiento promedio del 26.9%
para este mismo producto11.
En la tabla 4 se exponen lo precios alcanzados en Europa para los diferentes tipos de zumo de ctricos en 2008, donde podemos observar unos precios
muy atractivos para el zumo de limn debido a la escasa produccin de este
producto en este continente. El mercado abastecedor de Europa en zumos
est dominado por pases suramericanos, donde Argentina, Mxico y Brasil
juegan un papel muy importante. Cabe destacar la importancia de las cotizaciones internacionales del concentrado de limas, precios que representan
oportunidades de inters para la industria citrcola colombiana.
Tabla 4. Precios de zumo en Europa
de diferentes orgenes en 2008.
Tipo de zumo
Concentrado congelado, 66
Brix
Naranja

Zumo no concentrado
(NFC no from concentrate)
Concentrado congelado, 58
Brix, rojo

Pomelo

Limn
Lima

Concentrado congelado, 58
Brix, blanco
Concentrado congelado, 500
galones, 6% max. de pulpa
Concentrado congelado, 400
galones, 4-6% de pulpa

Precio
(USD$/ton)
1.700-1.800
fca dup EU
800
fca dup EU
1.550
cif EU
1.350-1.400
fca dup EU
1.600 cif EU
6.395
cfr EU
2.575-2.800
cfr EU

Origen
Brasil
Brasil
Florida
Cuba
Florida
Argentina
Mxico

Fuente: Market News Service for bulk-packed fruit juices Europe12.


Nota: fot: libre en el camin / fca: libre en el transportista / cfr: coste y flete / dp: impuestos pagados
/ dup: impuestos no pagados / df: libre de impuestos / dl: entregado en Europa.

Actualmente en Europa ms de la mitad de las ventas de frutas y verduras se hace a travs de los supermercados. En mercados como el Reino Unido es notoria la participacin de multinacionales como Chiquita Brands,
Dole, Agrexco, Fyffes y Del Monte, quienes interactan con estrategia de
/ 16 /

Situacin actual de la cadena de ctricos en Colombia: limitantes y perspectivas

negocios globalizados, en ocasiones, directamente con los centros de compra de los minoristas o formando alianzas para compartir infraestructuras
de produccin, transporte y comercializacin lo que permite mantener
ventajas competitivas en calidad y precios.
En el Reino Unido los supermercados ms importantes son Tesco, Sainsbury, Asda/Wal-Mart, Safeway, Somerfield. En Francia tenemos a Carrefour,
Auchan, Leclerc, Intermach, Systeme U y Casino. En Alemania, destacan
Edeka, Rewe, Aldi, Metro, Markant y Wal Mart Los supermercados no realizan importaciones directas y delegan esta funcin a importadores especializados que son los que se encargaran incluso de sensibilizar a los abastecedores en
los conceptos de las buenas prcticas GlobalGAP, inocuidad y trazabilidad.
Se piensa que la rpida expansin de la produccin mundial de la naranja ir
frenando, debido a que actualmente Brasil est enfrentando dos problemas graves de enfermedades: el cancro ctrico (Xanthomonas axonopodis) y la clorosis
variegada del ctrico (CVC, Xylella fastidiosa). Los citricultores estn recibiendo
un precio menor por las naranjas utilizadas para el procesamiento, lo que ha reducido el ritmo del cultivo de nuevas plantaciones. La Florida tambin est siendo amenazada por el virus de la tristeza de los ctricos (CTV) y el cancro ctrico.
Los bajos precios en la Florida han reducido tambin el nmero de nuevos
cultivos. Los precios ms bajos afectarn tambin a otros pases productores del
hemisferio occidental como Mxico, Belice, Costa Rica, Argentina y Cuba. Estos pases asignan una proporcin de la produccin de naranja para el procesamiento, que est dominado por Brasil (So Paulo) y Estados Unidos (Florida)13.
Las mandarinas difieren de las naranjas en que casi toda su produccin va
dirigida al mercado de frescos. Los mayores productores de mandarinas son
China, Espaa, Japn, seguidos por Brasil, Corea, Pakistn, Italia, Turqua,
Egipto, Estados Unidos, Marruecos y Argentina. Espaa ha tenido un xito
significativo en Europa, y ms recientemente en los Estados Unidos, con las
variedades de Clementina sin semilla.
Espaa es responsable por el 50 por ciento de las exportaciones mundiales
de mandarinas (sobretodo clementinas) frescas. Los otros exportadores son
Marruecos y China. Marruecos tiene una industria muy desarrollada, y exporta exitosamente a Europa y a los Estados Unidos.
La mayora de las mandarinas se consumen en el pas de produccin, por lo
que los mayores consumidores son China, Japn, Pakistn y Egipto. La produccin domstica respalda significativamente el consumo en Argelia, Mxi/ 17 /

Pedro F. Aguilar Nio, Manuel Jos Escobar Quijano, Catarina Pedro Pssaro Carvalho

co, Israel, Australia, Argentina, Paraguay, Bolivia, Chipre, Jordania, Lbano,


Corea y los Estados Unidos. Los pases de la Comunidad Europea, excluyendo a Espaa, Italia, Grecia y Portugal, son los principales pases importadores.
El hecho ms interesante en el consumo de la mandarina fresca, son las variedades de Clementina sin semilla que se estn cultivando actualmente en Espaa
y en Marruecos. El consumo de este producto en los Estados Unidos y Canad
aument drsticamente en los ltimos cinco aos. Su pequeo tamao, adems
de las caractersticas de cscara suelta, fcil de pelar y sin semilla, hace de esta
una fruta muy apetecida para el consumo de los nios y de las personas mayores.
Se prev que Espaa mantendr su papel dominante como exportador de
mandarinas. El xito de las variedades de Clementina le ayudar a retener esta posicin. Marruecos es el segundo exportador en importancia de mandarinas frescas.
Las preocupaciones fitosanitarias han limitado la habilidad tanto de Mxico como de Brasil, de iniciar la exportacin de mandarinas frescas.
La zona de produccin ctrica principal al este de Mxico contina con
problemas debido a una plaga de la mosca de esta fruta. La reciente epidemia
de cancro ctrico en Brasil restringir los planes de los productores de expandir las exportaciones de mandarina y otras variedades de ctricos.
China tambin expandir su produccin y consumo interno de naranjas y
mandarinas, lo que probablemente implique que China se convertir en un
destino clave para los ctricos procesados y frescos, destacndose oportunidades para el pomelo fresco.
Se vaticina que otros pases productores de Amrica Latina, como Argentina, Mxico, Cuba, Belice y Costa Rica, continuarn aumentando su produccin, aunque a un paso menos acelerado.
Con excepcin de Espaa, se prev que otros pases europeos continuarn
experimentando pequeas reducciones en la produccin. En Asia tambin
se prev una expansin de la produccin y consumo de ctricos, aunque el
consumo estar cubierto por la produccin domstica. Muchos de estos pases
mantendrn altos aranceles sobre las importaciones de ctricos a fin de proteger sus propias industrias.
El aumento casi mnimo del consumo per cpita en las regiones de Amrica del Sur, es el resultado de un crecimiento ms lento de la produccin domstica, y de un pequeo incremento proyectado para el mayor abastecedor
de productos procesados de naranja: Brasil13.
/ 18 /

Situacin actual de la cadena de ctricos en Colombia: limitantes y perspectivas

La mayor parte del aumento en el consumo tendr lugar en los pases productores de ctricos, como India, Pakistn, China, Mxico y Brasil.
Brasil y Mxico tienen la particularidad, igual que todos los pases latinoamericanos que tradicionalmente producen naranja fresca, de consumir
el zumo de naranja recin exprimido. En los ltimos aos, no obstante, los
consumidores en Brasil y Mxico han comenzado a comprar zumo de naranja
listo para consumo. Esta tendencia continuar a medida que los ingresos de
estos pases permitan el cambio de una produccin casera a la compra directa
de zumo de naranja.
La lima y el limn se consumen en muchos pases del mundo. La importacin de stos representa aproximadamente el 18 por ciento del consumo mundial. Adems de los pases desarrollados de Amrica del Norte y de
Europa, la lima y el limn tambin se consumen en Europa del Este, y en
la antigua Yugoslavia, adems de los pases en desarrollo productores, como
India, Irn, Mxico, Brasil, Argentina, Bolivia, Per y Jamaica. Los pases del
Cercano Oriente, incluyendo a Jordania, Chipre, Lbano y Egipto tambin
cuentan con altos niveles de consumo per cpita13.
Situacin Nacional
Produccin

La geografa colombiana presenta condiciones favorables para el cultivo de los


ctricos; las zonas productoras se encuentran ubicadas entre los 0 m y los 1600 m
de altitud, con temperaturas medias de 23C a 34C, pluviosidades acumuladas
anuales de 900 mm a 1200 mm y luminosidad mayor a 1900 horas de brillo solar
anual. La produccin de fruta es permanente, a travs de todo el ao, con pocas
marcadas de concentracin de la cosecha, segn sea la distribucin de la precipitacin, unimodal o bimodal, caractersticas de la zona Andina14.
El cultivo de los ctricos tuvo una participacin del 1.38% en la produccin de cultivos permanentes en el ao 2010. Tanto el rea sembrada como
la produccin decrecieron entre 2007 y 2010 (figura 1), a una tasa anual promedio del -5.5 y -10.3%, respectivamente; y con un consecuente rendimiento
de -4.8%15.
El mercado nacional de los diferentes ctricos muestra un desabastecimiento por cuenta de una menor produccin generada por la ola invernal que
vena sosteniendo el pas desde el 2007, lo que ha conducido a la reduccin
de la produccin, en las diferentes regiones productoras y citrcolas.
/ 19 /

35.000

700.000

30.000

600.000

25.000

500.000

20.000

400.000

15.000

300.000

10.000

200.000

5.000

100.000

Produccin (Toneladas)

rea (Hectareas)

Pedro F. Aguilar Nio, Manuel Jos Escobar Quijano, Catarina Pedro Pssaro Carvalho

0
2007

2008

rea

2009

2010

Produccin

Figura 1. Produccin y rea cosechada de ctricos en Colombia 2007-2010.


Fuente: Agronet15.

Esta condicin climtica, trajo como consecuencia, una disminucin


considerable de las producciones de naranjas, mandarinas, limas cidas y
tangelos, entre otros, lo que afect la disponibilidad de estas frutas en toda
la cadena de intermediacin. Esta disminucin en la produccin de ctricos, permiti la importacin de varias toneladas, unas legales, y se presume
que una importante cantidad de contrabando, desde Venezuela, Ecuador y
de los Estados Unidos, particularmente. Dichas importaciones, , tienen un
riesgo inminente de traer plagas y enfermedades que ponen en alto riesgo la
citricultura nacional.
Segn Orduz, et al.14, los ctricos son cultivados en 21 departamentos, que
fueron agrupados en cuatro ncleos productivos en el Acuerdo de Competitividad de Ctricos:
t Centro-Oriente: conformado por Santander, Norte de Santander, Boyac, Cundinamarca, Tolima y Huila.
t Sur-Occidente: conformado por los departamentos del Eje Cafetero (Caldas, Risaralda y Quindo), Antioquia, Valle del Cauca y Nario.
t Costa Atlntica: conformado por Atlntico, Bolvar, Cesar, Crdoba, Sucre, Magdalena y La Guajira.
t Orinoqua: compuesto por Meta y Casanare.
/ 20 /

Situacin actual de la cadena de ctricos en Colombia: limitantes y perspectivas

En la tabla 5 se muestra la composicin de la produccin nacional de


ctricos por especie, donde podemos observar que esta est mayoritariamente compuesta por naranjas mandarinas y limas cidas. Cabe resaltar
la tasa promedio de crecimiento en produccin para el periodo de 20072010 de toronja (70.3%), mandarinas (33.4%) y lima (19.7%). Para naranja el aumento fue ms reducido (3.7%), tangelo Mineola (-24.9%),
tangelo Orlando (-3.4%) incluso se verifica una disminucin de la produccin en los ltimos aos15.
Tabla 5. Produccin nacional de ctricos en 2010.
Especie

Produccin (ton)

(%)

Naranjas
Mandarinas
Limas cidas
Tangelo Mineola
Tangelo Orlando
Toronja
Otros
Total

228.128
109.768
92.304
580
421
196
27.754
459.151

49,7
23,9
20,1
0,13
0,09
0,04
6,1
100

Fuente: Agronet15.

Dado el gran auge en la produccin de lima Tahit en el occidente


de Cundinamarca y oriente del Tolima y Huila, algunos productores se
han diversificado y cambiado cultivos de mango y guanbana por este
ctrico. Estos productores se caracterizan por poseer formacin superior,
capital de riesgo y una extensin de tierra cosechada que vara entre las
10 y 15 hectreas. Algunos de estos productores realizan inversiones
importantes en tecnologa: compran insumos de calidad, realizan un
adecuado manejo agronmico y tienen acceso a fuentes acadmicas y de
investigacin local.
El mercado limas se encuentra en expansin y ofrece grandes oportunidades para la produccin nacional tanto en fresco como en procesado
(zumo concentrado, aceite esencial destilado, terpenos, pectinas, cido ctrico y cscara deshidratada).
Debe resaltarse nuevamente que las limas de origen colombiano no presentan restricciones de orden fitosanitario en los mercados externos, por
lo tanto este rengln se constituye en un producto promisorio para la fru/ 21 /

Pedro F. Aguilar Nio, Manuel Jos Escobar Quijano, Catarina Pedro Pssaro Carvalho

ticultura exportadora nacional. Lgicamente debe trabajarse en la calidad


demandada, la oferta de volmenes constantes, la consistencia en la calidad,
el material de empaque adecuado, la logstica de exportacin, las normas
y certificaciones requeridas por los mercados de destino y en los limites de
residualidad de agroqumicos y pesticidas (MRL) establecidos por los mercados externos.
Es importante anotar que aunque el mercado nacional de limas y limones
se abastece en un 90% con produccin interna, tanto la produccin nacional
como las importaciones vienen en aumento para satisfacer los requerimientos
crecientes de la demanda16.
Comercializacin

Los ctricos se comercializan en forma tradicional utilizando canales de comercializacin como las centrales mayoristas donde el acopiador rural compra
el producto a campesinos y pequeos productores para trasladarlo a la plaza
regional donde es comprado por el intermediario mayorista para venderlo a
los detallistas.
Aunque hay comercializadores organizados en algunas regiones del pas
que distribuyen el producto en canastillas plsticas o en empaques rgidos de
cartn, la prctica ms comn es no someter la fruta a procesos de seleccin y
comerciarla en costales de diversos tamaos y pesos
En los sistemas de comercializacin tradicionales se observa una alta participacin de intermediarios, en parte porque no hay exigencias en cuanto a
empaque o calidad externa del fruto, y los volmenes y los precios se fijan
segn la oferta y la demanda del momento. El producto se comercializa sin
norma tcnica en la mayor parte de las zonas productoras.
Es comn el tradicional sistema de comercializacin en los cuales los
comercializadores mayoristas adquieren el producto directamente de otros
comercializadores menores y agricultores o productores directos. Al contrario en los mercados especializados, hay exigencias de calidad, tamao,
empaque, volumen permanente, el precio se fija previamente mediante contratos establecidos.
En la figura 2, se representan los diferentes actores de los canales de comercializacin tradicionales en Colombia para ctricos.
En el caso del mercado especializado, por ejemplo, en la cadena de comercializacin del limn en el Tolima se han identificado los siguientes actores (figura 3):
/ 22 /

Situacin actual de la cadena de ctricos en Colombia: limitantes y perspectivas

Productor

Acopio Rural

Acopio mayorista
transportador

Mayorista de
plaza nacional

Distribuidor
minorista

Minorista

Figura 2. Canales de comercializacin tradicionales para ctricos en Colombia.


Fuente: MADR16.

Productor

Comercializador

Comercializador

Industria

Distribuidor

transformadora

Tiendas o
supermercados

Figura 3. Cadena de comercializacin del limn en el Tolima.


Fuente: MADR16.

/ 23 /

Pedro F. Aguilar Nio, Manuel Jos Escobar Quijano, Catarina Pedro Pssaro Carvalho

En el mercado en fresco las variedades que ms se comercializan son la


naranja Comn y Valencia, de las cuales se han desarrollado marcas propias
para supermercados.
Tambin se comercia la variedad tangelo Mineola, as como las variedades Orlando y Washington que son apetecidas naranjas de mesa por su
sabor dulce y su atractiva presentacin externa
El mercado en fresco de frutas se ha fortalecido con la intervencin de
grandes cadenas de supermercados y centrales de abasto. As por ejemplo, la
produccin del Eje Cafetero y del suroeste Antioqueo abastece la cadena
de almacenes del Grupo xito. Por ejemplo la cadena Carulla, de propiedad
del Grupo Exito, compra naranja en los Llanos Orientales, en los Santanderes y Centro del pas. En pocas de escasez los supermercados importan
naranja valencia (y algunas otras especies en menor escala) procedente de
Per, Venezuela, Ecuador y ocasionalmente, naranja Washington de Espaa y Estados Unidos.
Algunas de las comercializadoras establecidas de fruta en fresco que sobresalen en el pas son: Entre Ros y Jugosa (Risaralda); Frutas Cambia (Caldas); Cicolsa y Ctricos Valdivia (Quindo); Frescas y Servifruit (Valle del
Cauca); Tnez y Agrcolas Unidas S.A. (Antioquia)16.
La Cadena de ctricos, como se explic en secciones anteriores, incluye
productos en su fase primaria tales como las naranjas, limones, limas, mandarinas y toronjas, y una serie de productos asociados a la fase industrial
como zumos, concentrados, nctares, purs, pastas, pulpas, jaleas, mermeladas, aceites, esencias y pellets para alimentacin animal.
La industria se provee de materia prima a travs de la compra directamente al productor mediante negociaciones por contrato o comprando
la fruta en el cultivo con pago a 30 das. Gran parte de esta fruta se
procesa para producir concentrado de naranja que se comercializa en el
mercado internacional para ser mezclado con zumos dulces y aportarles
acidez.
En el Eje Cafetero colombiano se encuentra localizada gran parte de
la industria procesadora de ctricos del pas, con una capacidad de procesamiento de 110.000 toneladas de naranja por ao, distribuidas entre
Cicolsa-Quindo con 50.000 Tm./ao, Frutropico-Antioquia con 40.000
Tm./ao, Frutasa-Caldas con 13.000 Tm./ao y Passicol-Caldas con 7.000
Tm./ao17.
/ 24 /

Situacin actual de la cadena de ctricos en Colombia: limitantes y perspectivas

Los ctricos para consumo industrial, a pesar de que mostrar una fase recesiva entre 1993-1997, entraron en un perodo de expansin entre 1997 y
2001, evidenciando seales del fortalecimiento de la industria nacional de
procesados de ctricos.
Sin embargo, el desarrollo de la agroindustria de ctricos en Colombia y
su encadenamiento con el sector primario, se ha visto afectado principalmente por problemas con el suministro de materia prima que no se ajusta a sus
requerimientos, ni calidad, pues no cumple con los requerimientos ptimos
para su procesamiento; ocasionalmente los precios tampoco resultan de inters para los productores quienes prefieren ofrecer la naranja en el mercado
en fresco pues reciben precios mas altos que los ofrecidos por la agroindustria16. Adems, la industria nacional de jugos cuenta con un muy bajo nivel
de certificacin no cumpliendo con los requisitos de trazabilidad, inocuidad
y normas de calidad exigidas no solamente por los mercados externos pero
tambin por las grandes superficies en el pas, lo que ha dificultado y reducido
la participacin de estas en el mercado.
No obstante, la expansin del mercado de procesados se ha dado gracias
al suministro de productos importados a menores precios, aunque de calidad
muy variada17, debido a que la oferta mundial de ctricos es muy amplia, las
economas de escala y la tecnologa aplicada al sector por parte de grandes
pases productores hace posible obtener precios ms bajos de materia prima
que los precios que registra la fruta fresca nacional.
Esto evidencia la gran necesidad en el sector citrcola de desarrollar paquetes tecnolgicos de variedades que cumplan con los requerimientos de la
industria, la cual a su vez debe ofrecer garanta con continuidad en el tiempo
y estabilidad en el precio para los productores.
Precios y balanza comercial
Los precios de los Ctricos y sus diferentes variedades, presentan un comportamiento muy dismil, por producto y por regin. En las principales plazas
mayoristas del pas se manejan precios muy diferentes, debido a que obedecen
a las leyes de oferta y demanda (tabla 6). Mientras que en las plazas de Bogot, Cali y otras ciudades, se comercializa la Mandarina Arrayana, en Medelln
solamente se maneja la Mandarina Oneco. Los precios difieren mucho entre
el grupo de las Naranjas, los Tangelos, las Limas cidas y Mandarinas. Adems
de la clasificacin por variedades, se realiza una clasificacin por calidad (primera, segunda, tercera e industrial).
/ 25 /

Pedro F. Aguilar Nio, Manuel Jos Escobar Quijano, Catarina Pedro Pssaro Carvalho

Tabla 6. Precios promedio de mercado para ctricos durante el


periodo 2010-2011 en Colombia.
Precio ($ / Kg)

Producto

Bogot

Medelln

449
881
1.354
1.439
1.250
810
-

1.033
1.500
1.884
936
1.491

Naranja Comn
Naranja Valencia
Mandarina Arraya
Mandarina Comn
Mandarina Oneco
Limn Tahiti
Tangelo

Fuente: Agronet15.

En cuanto a mandarinas, los precios nacionales se han mantenido altos para


el productor y consumidor final, aunque la importacin de esta fruta ha mostrado un crecimiento en los ltimos aos, alcanzndose un precio implcito de
US$ 125 / ton en 2011 en comparacin con US$ 139 / ton en 2010 (figura 4).

12K

1.200.000
1.000.000

8K

10K

800.000

6K

600.000
400.000

4K

Toneladas

US $

Valor (US$ CF) y Volumen (Ton) de las mportaciones


1.600.000
1.400.000

2K

200.000
0

0K
2007

2008

2009

US$ CIF

2010

2011

Toneladas

Figura 4. mportaciones nacionales de mandarinas 2007-2011, HS


0805201000.
Fuente: Agronet15.

Colombia enfrenta problemas para incursionar en los mercados externos


debido entre otros factores a que no se cuenta con las variedades ni calidades adecuadas, no hay continuidad en la oferta exportable e igualmente se
deben superar problemas de empaque y presentaciones, as como de barreras
tcnicas y sanitarias. De hecho, la balanza comercial de ctricos fue negativa
/ 26 /

Situacin actual de la cadena de ctricos en Colombia: limitantes y perspectivas

(-3.7%) para el perodo 2007-2010, pasando de US $4.048.585 a $2.613.531


(0805100000 Naranjas; 0805201000 Mandarinas (incluidas las tangerinas y satsumas); 0805202000 Tangelo (Citrus reticulata x Citrus paradisis);
0805209000 Clementinas, wilkings e hbridos similares de agrios; 0805301000
Limones, 0805302000 Lima agria (Citrus aurantifolia); 0805400000 Pomelos
o toronjas; 0805501000 Limones; 0805502100 Limon (limn sutil, limn
comn, limn criollo) (Citrus aurantifolia); 0805502200 Lima Tahit (Citrus
latifolia); 0805900000 Los dems frutos agrios) (figura 5).
Balanza Comercial (US$)
6.000.000
5.000.000

US $

4.000.000
3.000.000
2.000.000
1.000.000
0

2007

2008

2009

2010

Figura 5. Balanza comercial nacional para ctricos frescos 2007-2011


Fuente: Agronet15.

En relacin al abastecimiento de los ctricos, especialmente de la naranja


Valencia y nativas, se presenta un dficit en cuanto a la oferta y demanda, lo
que afecta negativamente el acceso y precio de compra por parte del consumidor final. Las importaciones se han venido presentando, con fruta de muy
poca calidad cuando proviene de Ecuador y Venezuela, pero de muy buena
calidad cuando el origen es Per, Estados Unidos o Espaa, y en todos los casos
con precios altos que afectan el mercado nacional, aunque eventualmente sean
favorablemente recibidos por los consumidores quienes valoran y aprecian un
producto bien presentado y con adecuado ndice de maduracin (tabla 7).
Es importante anotar que las importaciones ctricos, en especial en forma
fresca, resuelve problemas coyunturales de desabastecimiento en el mercado
interno que incentivan la entrada del producto cuando los precios internos
son altos, especialmente de pases fronterizos como Ecuador y Venezuela.
Las exportaciones nacionales de ctricos se dan mayoritariamente en fresco, siendo los productos lder la lima agria y naranja15.
/ 27 /

Pedro F. Aguilar Nio, Manuel Jos Escobar Quijano, Catarina Pedro Pssaro Carvalho

Tabla 7. mportacin de naranjas frescas por pas de origen,


HS 0805100000.
Pas de Origen

Toneladas

US$ CIF

Chile
Ecuador
Espaa
Estados Unidos
Per
Venezuela

83,9
14.907,8
55,5
392,6
251,5
1.478,0

93.106
1.465.375
70.155
446.482
260.850
247.808

Precio
Implcito
1.110,38
98,30
1.263,63
1.137,20
1.037,11
167,66

Fuente: Agronet15.

En la figura 6 podemos observar la balanza comercial para limn, siendo


de destacar que la lima Tahit al contrario de los dems ctricos presenta una
balanza positiva que se ha mantenido mas o menos estable entre 2007-2010
donde los principales pases destino fueron EE.UU., Martinica y Guadalupe.
Las importaciones son sobretodo de limones provenientes de Ecuador.
Mercados de Destino, 2010

Exportaciones Limn Tahiti, HS 0805502200


Ao

Ton

US$000

US$

2002
2004
2006
2007
2008
2009

94
1466
2788
3596
2503
1486

FOB
$ 68
$ 855
$2.095
$ 2.995
$ 2.584
$ 1.500

Kg
$ 0,72
$ 0,58
$ 0,75
$ 0,83
$ 1,03
$ 1,01

2010

3034

$ 2.882

$ 0,95

Pas
USA
Martinica
Guadalupe
Blgica
Cuba
Puerto R
Guayana
Ecuador
Otros

Importaciones de limones, HS 0805301000


Ao

Tons

1997
2000
2001
2005
2009
2010

2966
4725
6318
2112
4563
588

US$000
Valor CIF
$ 429
$ 564
$ 557
$ 159
$ 486
$ 146

Px
Implicito
$ 0,14
$ 0,12
$ 0,10
$ 0,08
$ 0,11
$ 0,25

Tons
1389
663
460
166
118
110
37
30
61

Pases de Origen, 2009


Pas
Ecuador
USA
Chile

Tons
4254
236
47

Figura 6. Balanza comercial nacional para limn.


Fuente: Agronet15.

/ 28 /

%
46%
22%
15%
5%
4%
4%
1%
1%
2%

%
93%
5%
1%

Situacin actual de la cadena de ctricos en Colombia: limitantes y perspectivas

Las exportaciones nacionales de ctricos en fresco, se destinan por orden de importancia a los mercados de Ecuador, Guadalupe, EE.UU. y
Martinica (tabla 8).
Tabla 8. Destino de las exportaciones nacionales de ctricos 2011 (partidas
arancelarias: 0805100000; 0805201000; 0805202000; 0805209000;
0805301000; 0805302000; 0805400000; 0805501000; 0805502100;
0805502200; 0805900000).
Pas
Ecuador
Guadalupe
Estados Unidos
Martinica
Cuba
Holanda
Guayana Francesa
Panam
Aruba
Antillas Holandesas
Total

Volumen
(toneladas)
1.015,0
577,3
473,0
389,4
170,2
42,6
24,1
13,4
12,4
1,3
2718,7

Valor (Miles
US $)
234,9
704,8
833,1
574,5
352,0
42,9
10,8
22,9
6,7
1,0
2.783,7

Fuente: Agronet15.

Los principales productos ctricos que Colombia importa son: Jugo de


naranja congelado (50,6%), Naranjas frescas (17,0%), Mandarinas (11,1%),
Limones (8,2%) y otros jugos de naranja (4,7%), representando todos ellos
el 91,6 % del total de los ctricos importados por Colombia. El producto
mas dinmico en las importaciones de la Cadena es la mandarina con un
crecimiento promedio anual de 65.1%, sin embargo tambin sobresalen las
importaciones de toronjas con incrementos de 55.4%, los dems frutos agrios
frescos con 53.3%, purs y pastas de agrios con 52.2% y limas con 51.0%16.
Sobre los principales mercados de origen de las importaciones de la Cadena, se observa que el jugo de naranja congelado es proveniente sobretodo
de Brasil y Mxico, mientras que Estados Unidos es el principal abastecedor
para los dems jugos de naranja. Venezuela, Ecuador y Estados Unidos son
los principales proveedores de naranjas frescas; Ecuador, EE.UU. y Per de
mandarinas frescas , y finalmente Ecuador y EE.UU. lo son para limones
frescos (tabla 9).
/ 29 /

Pedro F. Aguilar Nio, Manuel Jos Escobar Quijano, Catarina Pedro Pssaro Carvalho

Tabla 9. Principales importaciones por partidas


arancelarias de ctricos en 2011.

Brasil
EE.UU.
Mxico
Chile
Ecuador
Espaa
EE.UU.
Per
Venezuela
Ecuador
EE.UU.
Per
Ecuador
EE.UU.

Volumen
(toneladas)
736,0
14,3
449,2
83,9
14.907,8
55,5
392,6
251,5
1.478,0
11.361,0
178,6
178,9
365,7
167,3

1.974.174
45.594
1.210.621
93.106
1.465.375
70.155
446.482
260.850
247.808
864.558
404.202
198.246
35.796
228.120

Precio Implcito
(US$ / ton)
2.682,37
3.191,80
2.695,10
1.110,38
98,30
1.263,63
1.137,20
1.037,11
167,66
76,10
2.262,7
1.107,9
97,8
1.363,3

EE.UU.
Mxico
Polonia

620,3
6,0
34,3

986.794
4.034
47.692

1.590,8
668,7
1.390,8

Producto

Origen

Jugo de naranja
congelado (HS
2009110000)

Naranjas frescas
(HS 0805100000)

Mandarinas (HS
0805201000)
Limones (
Otros jugos
de naranja
(2009120000;
2009190000)

US$ CIF

Fuente: Agronet15.

La Cadena enfrenta un dficit estructural de concentrado de naranja,


para la industria de jugos, y algunas importaciones coyunturales de naranja
Valencia procedente de Venezuela, especialmente en los meses de octubreabril, sobretodo para abastecer los mercados de Bogot y Medelln. Las importaciones que provienen de Ecuador son de baja calidad y normalmente
se transan a precios inferiores. La variedad Washington es importada por
cadenas de supermercados para su consumo en estratos altos dada su calidad
y precio
Los principales productos de la Cadena de Ctricos que se tranzan internacionalmente son:
t Naranjas frescas o secas.
t Limones frescos o secos.
t Mandarinas (incluidas las tangerinas y satsumas) frescas o secas.
/ 30 /

Situacin actual de la cadena de ctricos en Colombia: limitantes y perspectivas

t Lima agria o mejicana (Citrus aurantifolia) fresca o seca.


t Toronjas o pomelos frescos o secos.
t Zumo de naranja congelado.
t Agrios (ctricos) preparados o conservados de otro modo, incluso con adicin de azcar u otro edulcorante o alcohol.
t Zumo de cualquier otro agrio (ctrico).
t Los dems zumos de naranja.
t Confituras, jaleas y mermeladas de agrios (ctricos).
t Purs y pastas de agrios (ctricos).
t Zumo de toronja o pomelo.
t Los dems frutos agrios (ctricos), frescos o secos.
t Las dems mandarinas. clementinas, wilkings e hbridos similares de
agrios, frescos secos.
Costos

El comportamiento de los costos de produccin ha tenido un incremento anual de alrededor del 5,3%. Estos aumentos se explican bsicamente por el excesivo incremento en los precios de los fertilizantes y
otros insumos con un 42,4%, seguido del costo de mano de obra con
un 40,6% 15.
La semilla para los cultivos de tardo rendimiento, en el primer ao
representa un costo alto, pero para el anlisis de los siguientes aos no
repercute.
Los agroqumicos en los ltimos aos han tenido precios especulativos, llevando a estos cultivos a tener menor rentabilidad en el ejercicio
productivo. En general, el cultivo de los Ctricos, es una actividad que
demanda, al concluir el tercer ao (entrada en produccin), cerca de
$14 millones de pesos por hectrea (tabla 10). En el primer ao de establecimiento sus costos pueden pasar del 60% del costo total. Para el
segundo y tercer ao, los costos suman un 40% del total de los costos
de produccin.
/ 31 /

Pedro F. Aguilar Nio, Manuel Jos Escobar Quijano, Catarina Pedro Pssaro Carvalho

Tabla 10. Costos de produccin por hectrea para un periodo


de establecimiento de 1 5 aos de un pomar de ctricos.
Concepto

2005

2006

2007

2008

% por concepto

Semilla
Fertilizantesagroqumicos
Empaques
Mano de obra
Otros
Costo por Ha

1.705.725

1.795.500

1.890.000

2.100.000

13,65%

3.595.425

3.784.658

3.983.850

4.426.500

28,7%

162.450
171.000
5.081.579 5.349.030
1.949.400 2.052.000
12.494.579 13.152.188

180.000
5.630.558
2.160.000
13.844.408

200.000
6.256.176
2.400.000
15.382.676

1,3%
40,6%
15,6%
100%

Fuente: Agronet15.

Consumo
El mercado colombiano se caracteriza por el bajo consumo de frutas. El
consumo per cpita de frutas, calculado a partir del consumo nacional aparente, se situ en el 2001 en 45,8 Kg (excluidos el banano y el pltano de
exportacin), como se observa en la tabla 11, cifras que son inferiores al promedio mundial reportado por la FAO de 59,8 Kg. Esta situacin confirma
que Colombia an hace parte del grupo de pases con ingresos y estndares de
vida que privilegian el gasto en alimentos bsicos como cereales, tubrculos y
races, respecto al de productos con mayor contenido nutricional18.

El consumo de frutas y hortalizas de los pases de la Unin Europea, as


como de Estados Unidos y Canad, es dos y hasta tres veces mayor al consumo de Colombia.
Incluso, respecto a la Comunidad Andina de Naciones (CAN), compuesta
por pases con niveles de desarrollo econmico y social similares, Colombia
registra uno de los niveles ms bajos en consumo de productos hortofrutcolas. No obstante lo anterior, en el caso de las frutas, el consumo durante la
ltima dcada ha sido muy dinmico comparado con el consumo promedio
mundial. En Colombia el consumo per cpita de frutas aument a un ritmo
del 3,3% promedio anual, frente a una tasa del 1,7% mundial, generando un
incremento en la produccin.
Una de las caractersticas del consumo de frutas es la concentracin del
gasto en pocos productos. Es as como, segn la Encuesta de Ingresos y Gastos del Dane para 1994 y 1995, cinco productos (naranja, mora, banano,
guayaba y tomate) representaron el 42% del gasto total en frutas. En el caso
de los ctricos, se calcula un consumo per cpita de 15 Kg / ao, el cual creci
/ 32 /

Situacin actual de la cadena de ctricos en Colombia: limitantes y perspectivas

en la ltima dcada, especialmente en mandarina y limn (3,5%)18. An as


estamos por debajo de los grandes consumidores de ctricos en el mundo. Por
ejemplo, para Estados Unidos el consumo de naranja solamente, ascendi a
los 9,3 Kg per cpita en 200920.
Tabla 11. Evolucin del consumo nacional de frutas frescas
(sin banano ni pltano de exportacin) 19912001.
Produccn Importaciones Exportaciones Consumo
1/
2/
2/
aparente 3/
Toneladas
Toneladas
Toneladas
Toneladas
1991
1,051,141
31,818
6,229
1,076,729
1992
1,326,670
49,633
7,978
1,368,325
1993
1,368,742
63,431
11,374
1,420,800
1994
1,437,396
92,111
4,140
1,525,368
1995
1,498,040
129,506
10,012
1,617,535
1996
1,615,464
109,508
2,747
1,722,225
1997
1,663,851
138,786
2,572
1,800,064
1998
1,714,099
113,194
20,391
1,806,902
1999
1,781,788
115,292
18,288
1,878,791
2000
1,796,996
129,552
16,879
1,909,669
2001
1,866,763
129,202
22,457
1,973,508
CREC 91/01%
4.8
11.9
11.5
5.1
Ao

Consumo per
capita 3/
Kilogramos
30.2
37.6
38.3
40.3
42.0
43.8
44.9
44.3
45.2
45.1
45.8
3.3

1 Anuario Estadstico del Sector Agropecuario. Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural. El


dato sobre la produccin no incluye prdidas, estimadas en 25%, ni demanda industrial, en 5%.
2 Bases de Datos de Comercio Exterior. DANE, DIAN.
3 Clculos: Corporacin Colombia Internacional, Sistema de Inteligencia de Mercados.
Fuente: CCI18.

Se espera que en las prximas dos dcadas, la mayor demanda por alimentos, as como los mayores cambios en su composicin, ocurran en los
pases en desarrollo o pases de medianos y bajos ingresos, entre los que esta
Colombia. Vale la pena anotar que la composicin del consumo de alimentos
y su variacin frente a incrementos en el ingreso en pases pobres da ms importancia al consumo de alimentos bsicos, como cereales y tubrculos, y a la
sustitucin dentro de este grupo de productos de bajo valor por productos de
mayor valor, en tanto que en pases de ingresos medios, como Colombia, un
incremento en el ingreso tiende a aumentar el gasto en fuentes de nutrientes
ms costosas como carnes, frutas y vegetales, y a disminuir el de cereales y
tubrculos, convirtindose en mercados muy sensibles a este tipo de cambios.
/ 33 /

Pedro F. Aguilar Nio, Manuel Jos Escobar Quijano, Catarina Pedro Pssaro Carvalho

Por su parte, en pases desarrollados, cuyo crecimiento econmico se ha


estabilizado y que tienen niveles altos de ingreso, la variacin en el ingreso
no implica cambios significativos en la estructura del consumo, pero s en
las caractersticas de la demanda que se orienta a productos con mayor valor
agregado como los procesados, productos novedosos como nuevas variedades de frutas y hortalizas y productos importados que se perciben como de
mejor calidad (la denominacin de pases de ingresos bajos, medios y altos
corresponde a la clasificacin hecha por el Banco Mundial)21.
Desde el punto de vista del ingreso, el 10% de la poblacin ms rica en
las zonas urbanas del pas capta el 39% del ingreso total y percibe doce veces
el ingreso del 40% de la poblacin ms pobre, mientras que el 74% de los
hogares tienen ingresos inferiores al ingreso promedio de la poblacin. Esto
es relevante por la importancia de la capacidad adquisitiva en el consumo de
frutas. Por ejemplo, en el gasto en frutas en el pas, la poblacin de mayores
ingresos tiene un peso relativo importante; a pesar de que este segmento
cubre slo el 16% de los hogares, responde por cerca de una cuarta parte del
gasto total en frutas.
Lo anterior es vlido especialmente para ctricos como la mandarina
que podran denominarse frutas de estrato alto. En cuanto a naranja,
hay una concentracin moderada del gasto en los estratos de mejores
ingresos18.
Interesante notar que la disponibilidad per capita en el mundo de ctricos frescos y procesados ha mostrado una disminucin en los ltimos
10 aos, lo que demuestra que sigue existiendo un mercado favorable para
estos productos sobretodo procesado (tabla 12). Observando la tendencia
para cada una de las especies por separado podemos ver que la disponibilidad per capita disminuy en los ltimos 10 aos de forma marcada para
naranjas y pomelos, mientras que para limas ha aumentado de forma marcada (tabla 13).
El consumo de zumos de frutas varia mucho segn los mercados. Sin embargo, hay una tendencia general a aumentar el consumo de zumos frescos
especialmente por el mayor grado de informacin e inters del consumidor
sobre el beneficio de estos productos para la salud. Esto ha dado origen a
un desarrollo de la industria de zumos ofreciendo productos dirigidos a
consumidores especficos como por ejemplo, el mercado de productos dietticos, certificados orgnicos, zumos con mezclas de sabores, con azcares
diferenciadas, entre otros.
/ 34 /

Situacin actual de la cadena de ctricos en Colombia: limitantes y perspectivas

Tabla 12. Disponibilidad per capita para ctricos frescos y procesados


(equivalentes en peso fresco) durante 2001-2009 en EE.UU.
Ao
2001
2002
2003
2004
2005
2006
2007
2008
2009

Frescos
(libras)
23,92
23,36
23,81
22,68
21,60
21,64
17,93
20,62
20,68

Procesados
Total (libras)
(libras)
90,25
114,17
84,16
107,52
83,96
107,77
83,65
106,33
78,17
99,77
71,36
93,01
67,14
85,07
61,97
82,59
63,43
84,11

Fuente: USDA/Economic Research Service21.

Tabla 13. Disponibilidad per capita para ctricos frescos por especie
(peso al por menor) durante 2001-2009 en EE.UU.
Ao
2001
2002
2003
2004
2005
2006
2007
2008
2009

Naranjas y
tangores
(libras)
11,5
11,4
11,5
10,5
11,1
9,9
7,2
9,6
8,8

Mandarinas
Total
Limones Limas Pomelos
y tangelos
(libras)
(libras) (libras) (libras)
(libras)
2,6
2,8
1,4
4,7
23,1
2,4
3,2
1,0
4,5
22,6
2,6
3,2
1,7
4,0
23,0
2,6
3,0
1,8
4,0
21,9
2,4
2,8
2,0
2,6
20,8
2,6
4,0
2,1
2,2
20,9
2,4
2,7
2,2
2,8
17,3
2,9
1,9
2,4
3,1
19,9
3,0
3,0
2,4
2,7
19,9

Fuente: USDA/Economic Research Service21.

Algunos embotelladores y grandes minoristas tambin han lanzado zumos


de frutas, especialmente zumo de naranja, elaborados a partir de zumo simple,
en lugar de concentrado. Si los consumidores aceptan bien esos productos, cada
vez ms harn falta materias primas en forma natural y no de concentrado16.
Empleo

Se estima que el sector citrcola gener en el ao 2009 aproximadamente


232.234 empleos de los cuales 43.936 son directos y 188.298 indirectos, estos
/ 35 /

Pedro F. Aguilar Nio, Manuel Jos Escobar Quijano, Catarina Pedro Pssaro Carvalho

ltimos relacionados con comercializadores, intermediarios, plazas mayoristas


y minoristas, mercados especializados y mercados mviles15.
El rengln de los Ctricos participa con aproximadamente un 24% de los
empleos directos generados dentro del sector de frutales en Colombia; la importancia que tiene este cultivo en la agricultura nacional, se refleja en el total
de empleos directos con relacin a los generados por el grupo de los frutales.
En proporcin, se dice que por cada empleo directo destinado a las labores
permanentes, se generan tres indirectos. Esto se refleja en estabilidad del subsector agrcola Ctricos.
Gremios
El sector citrcola cuenta con dos gremios eje en Colombia: Asohofrucol
y Asoctricos. Existe tambin el Fondo Nacional de Fomento Hortofrutcola, un fondo parafiscal administrado por Asohofrucol, cuyos objetivos son:
promover la investigacin, prestar asistencia tcnica, transferir tecnologa, capacitar, acopiar y difundir informacin, estimular la formacin de empresas
comercializadoras, canales de acopio y distribucin, apoyar las exportaciones
y propender por la estabilizacin de precios de frutas y hortalizas para el desarrollo del subsector, de manera que se consigan beneficios tanto para los
productores como para los consumidores nacionales.

La Cadena de ctricos incluye productos en su fase primaria tales como


las naranjas, limones, limas, mandarinas y toronjas, y una serie de productos
asociados a la fase industrial como: zumos, concentrados, nctares, purs,
pastas, pulpas, jaleas, mermeladas, aceites, esencias y pellets para alimentacin animal.
La Cadena ha suscrito tres acuerdos de competitividad*, uno a nivel nacional firmado en el ao 2000, y dos a nivel regional, un Acuerdo en la regin
Centro Occidente, firmado en 2002, y otro en la regin Tolima, firmado en
2002. Estn en proceso los acuerdos para los departamentos de Cundinamarca-Boyac, Santander y Costa Atlntica
El espacio de dilogo y concertacin que se ha creado con la Cadena, ha
permitido planificar la produccin de frutas asegurando el intercambio y reduciendo los costos de transaccin, por ello se debe continuar con el proceso
de fortalecimiento de la articulacin de la Cadena productiva con un enfoque
*Documentos disponibles en: www.agrocadenas.gov.co

/ 36 /

Situacin actual de la cadena de ctricos en Colombia: limitantes y perspectivas

comercial que le permita llegar al consumidor final con un producto de ptima calidad. A pesar de este esfuerzo an se considera que la representatividad gremial del sector es muy baja y es an notable la desarticulacin de los
diversos actores de la cadena ctricola; se requiere de un importante apoyo
institucional y mayor presencia del sector privado para superar las debilidades
y deficiencias anteriormente mencionadas.

Problemticas priorizadas
La Cadena de los Ctricos mediante reuniones con los diferentes actores de la cadena, ha desarrollado un diagnostico del sector citrcola nacional y ha identificado una serie de problemas limitantes del desarrollo
y competitividad de la cadena, las cuales las agrupa en tres grandes reas
prioritarias:
t Produccin.
t Poscosecha e industria.
t Fortalecimiento Gremial y Empresarial.
Las problemticas priorizadas para cada rea se detallan a continuacin:
Produccin
Problemtica

t Poca disponibilidad de variedades y materiales mejorados, y certificados


(VIVEROS).
t Bajo nivel tecnolgico en la produccin.
t Altos costos de produccin y bajos rendimientos.
t Falta de estudios de zonificacin que identifiquen nichos productivos de
calidad diferenciada para Colombia.
t Atomizacin y marginalidad de la produccin.
t Dbil investigacin de los procesos productivos y falta de transferencia de
los resultados existentes.
t Uso indiscriminado de agroqumicos.
t Poca implementacin de la produccin limpia (BPA).
t Manejo inadecuado de plagas y enfermedades.
/ 37 /

Pedro F. Aguilar Nio, Manuel Jos Escobar Quijano, Catarina Pedro Pssaro Carvalho

Poscosecha e industria
Problemtica:

t Poca infraestructura para un adecuado manejo en la etapa poscosecha.


t Centros de produccin muy distantes de los puertos.
t Mala logstica en los puertos.
t Ausencia de homogeneidad y estandarizacin del producto y/o materia
prima.
t Oferta discontinua y de bajos volmenes.
t Altas prdidas poscosecha.
t Ausencia de cadena de fro.
t Deficiente implementacin de empaques y presentacin.
t Falta de investigacin e implementacin de prcticas que alarguen la vida
til de los productos cosechados.
t Poca implementacin de BPA, BPM, y dems normas de calidad.
t Falta de investigacin en valor agregado al producto.
t Deficiente inteligencia de mercados.
t Pocos estudios de anlisis de riesgos para incursionar con mas productos
de exportacin.
Fortalecimiento Gremial y Empresarial
Problemtica

t Baja organizacin de productores, y si una base social empoderada de su


problemtica.
t Poca articulacin de las organizaciones con los dems eslabones de la cadena productiva.
t Baja transferencia y adopcin de tecnologa en temas organizacionales y de
asociatividad.
t Bajos incentivos o baja utilizacin de los existentes.
t Poco conocimiento de fuentes de financiacin.
t Poca gestin de proyectos para desarrollo tecnolgico y de innovacin.
t Formas de tenencia de la tierra tradicionales y sin legalidad.
/ 38 /

Situacin actual de la cadena de ctricos en Colombia: limitantes y perspectivas

Acciones
El apoyo del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, permiti en
el 2008, la creacin del Consejo Nacional Citrcola, a la vez que se activ la
Cadena Productiva de los Ctricos y le dio la importancia que el gremio representa para toda la Cadena.
El Consejo inici sus funciones el 22 de mayo de 2009 y ha venido realizando sus reuniones en las oficinas del Ministerio de Agricultura, en Palmira
Valle del Cauca y en Medelln Antioquia.
El Consejo, est dando y generando toda la confianza, para que las Entidades
de Apoyo inscritas en l, tengan la posibilidad de concretar acciones que redunden
en el desarrollo del sector; y a su vez, se planteen Planes, Programas y Proyectos
encaminados a resolver los problemas identificados y priorizados por la cadena.
Como accin primaria para la solucin de los principales problemas de la
cadena se desarroll y presento a la Direccin de Cadenas Productivas para su
Coordinacin e Implementacin (Ley 811 de 2003) el Plan Estratgico del
Acuerdo de Competitividad y Plan de Accin Anual:
1. Mejora de la productividad y la competitividad.

t Uso de material vegetal para propagacin libre de virus para Incrementar la produccin en los huertos de ctricos en Colombia.
I. Presentar el Plan Nacional de Certificacin de Material para Propagacin.
t Formular el Plan Nacional de Certificacin de Material Vegetal.
t Gestin para financiar el Plan Nacional de Certificacin.
II. Produccin masiva y uso de material vegetal para propagacin.
t Asegurar la produccin de material vegetal entre centros de Investigacin, viveristas e ICA.
t Asegurar la demanda de material vegetal para propagacin, mediante contratos de compra de los diferentes viveristas de ctricos
en Colombia.
2. Desarrollo del mercado de bienes de factores de la cadena.

t Mejorar y ampliar el posicionamiento a los mercados nacional e internacional de todos los ctricos.
/ 39 /

Pedro F. Aguilar Nio, Manuel Jos Escobar Quijano, Catarina Pedro Pssaro Carvalho

I. Agregacin de valor a travs de procesos poscosecha de ctricos para


consumo en fresco.
t Estructurar, formular y presentar el Plan Nacional de Abastecimiento para 8 centros de acopio y beneficio los ctricos en las 4
subregiones citrcolas del pas: 1 Costa Atlntica, 1 Santander, 1
Villavicencio, 1 Tolima - Huila, 1 Antioquia, 1 Eje Cafetero, 1
Cundinamarca - Boyac y 1 en Valle del Cauca - Cauca).
II. Fomentar el consumo de ctricos.
t Adelantar campaa publicitaria de promocin al consumo de ctricos a nivel nacional.

t Divulgacin de instrumentos crediticios (4 Regiones, 15 departamentos productores).


I. Aumentar el conocimiento de los actores de la cadena sobre el crdito institucional FINAGRO.
t Acompaamiento a productores y otros actores de la cadena en los procesos de gestin de crditos.
I. Lograr que un mayor nmero de productores se beneficien del crdito institucional.
3. Distribucin de los costos de transaccin de los diferentes actores de la cadena.

t Desarrollar un Programa Informativo que ayude a los eslabones de la


Cadena de los Ctricos.
I. Captura de informacin en reas sembradas y centrales de abasto a
travs de convenios con entidades y empresas dedicadas a esta actividad.

t Mejorar la eficiencia y eficacia en las transacciones que realizan los agentes de la cadena.
II. Realizar acuerdos entre productores, agroindustriales, minoristas y
mayoristas, con el fin de mejorar la coordinacin de todos los eslabones desde la produccin hasta el consumo.
4. Desarrollo de alianzas estratgicas de diferente tipo.

t Formular el Plan Citrcola Nacional.


I. Promover acuerdos regionales entre productores, entidades de apoyo del MADR, industrias de procesamiento, centros de investigacin,
comercializadores y la academia, para alcanzar.
/ 40 /

Situacin actual de la cadena de ctricos en Colombia: limitantes y perspectivas

t Promover el crecimiento de las exportaciones de las variedades de


ctricos.

t Consolidar en Colombia la actividad citrcola como una importante y


dinmica fuente de crecimiento sostenible, de desarrollo econmico y
social, y de la generacin de empleo e ingresos en las diversas regiones
rurales del pas, especialmente en las 4 regiones y 16 departamentos con
una diversificada oferta de ctricos exportables en el mercado mundial
de frutas, frescas y procesadas.
I. Desarrollar bases productivas para la produccin de productos de
alta calidad.
II. Formar y establecer una base de capital humano especializado.
III. Construir en las distintas unidades productivas, una slida capacidad nacional de tecnificacin, para la elaboracin de productos con
valor agregado.
IV. Construir capacidades en los distintos agentes del sector para la
identificacin, generacin y desarrollo de mercados presentes y potenciales de productos que puedan ser atendidos por la oferta nacional.
V. Desarrollar una institucionalidad, pblica y privada que garantice
la integracin activa y comprometida entre los diferentes actores de la
Cadena Citrcola, con miras al posicionamiento de estos agentes en las
4 regiones productoras.

t Especializacin territorial y nacional.


I. Desarrollar un clster para cada regin productora, con aquellos
ctricos con mejores ventajas comparativas y competitivas.
II. Buscar especializar las unidades productivas.
III. Buscar especializar los territorios.
IV. Vincular a Colombia al mercado de la cuenca del Caribe.
V. Vincular a Colombia al mercado Europeo.
VI. Vincular a Colombia al mercado de Centro Amrica.
VII. Vincular a Colombia al mercado de Sur Amrica.

t Construccin de una cultura innovadora.


I. Generar una cultura de innovacin en la regin Centro Occidente.
/ 41 /

Pedro F. Aguilar Nio, Manuel Jos Escobar Quijano, Catarina Pedro Pssaro Carvalho

II. Generar una cultura de innovacin en la regin Centro Oriente.


III. Generar una cultura de innovacin en la regin Llanos Orientales.
IV. Generar una cultura de innovacin en la regin Costa Atlntica.
5. Mejora de la informacin entre los agentes de la cadena.

t Programa de dinamizacin de la informacin de la Cadena de los Ctricos.


I. Construccin y difusin de base de datos sobre actores de la cadena
de ctricos.
II. Acopio y difusin de precios y mercados de ctricos.
6. Vinculacin de los pequeos productores y empresarios a la cadena.

t Fortalecimiento de la Capacidad Organizativa y Empresarial de Pequeos y Medianos Productores.


I. Fortalecer el proceso de asociatividad de CITRICAUCA y otras asociaciones de citricultores.
II. Fortalecer el proceso de asociatividad en 16 departamentos citrcolas de Colombia.
7. Manejo de recursos naturales y medio ambiente.

t Mejoramiento de la sostenibilidad del cultivo de los ctricos.


I. Implementar la gua ambiental del cultivo de los ctricos.
8. Formacin de recursos humanos.

t Fortalecimiento de procesos de transferencia de tecnologa y organizacin empresarial de productores.


I. Implementar Escuelas de Campo de Agricultores ECAS
9. Investigacin y desarrollo tecnolgico.

t Promover la seguridad fitosanitaria.


I. Monitoreo de permisos de importacin.
II. Definicin de plagas cuarentenarias para la citricultura, en pases
importadores de ctricos.

t Mejorar la oferta de servicios tecnolgicos.


I. Definicin de marco conceptual y operativo para la creacin del
Centro de Excelencia en Ctricos.
/ 42 /

Situacin actual de la cadena de ctricos en Colombia: limitantes y perspectivas

II. Gestin de alianzas interinstitucionales para la creacin del Centro


de Excelencia en Ctricos.

t Promover la seguridad fitosanitaria.


I. Monitoreo de permisos de importacin.
II. Definicin de plagas cuarentenarias para la Citricultura, en pases
importadores de Ctricos.

t Mejorar la oferta de servicios tecnolgicos


I. Definicin de marco conceptual y operativo para la creacin del
Centro de Excelencia en Ctricos.
II. Gestin de alianzas interinstitucionales para la creacin del Centro
de Excelencia en Ctricos.

Conclusiones y recomendaciones
Los ctricos son productos que ofrecen muchas ventajas a las personas que
son conscientes de su salud, que exigen conveniencia y le dan importancia a
alimentos seguros.
Algunas de las debilidades que enfrenta la Cadena de los Ctricos en Colombia son la falta de escalas comerciales significativas y la alta dispersin en
la produccin, el bajo grado de asociatividad entre los productores y la falta de
cultura agroempresarial que limita su acceso al crdito y a la asistencia tcnica, y adems restringe su capacidad de maniobra frente a otros actores; existe
poco grado de integracin entre la industria y la agricultura; no hay material
vegetal certificado; falta investigacin y transferencia de tecnologa (desarrollo
de variedades y calidades) en la fase agrcola y agroindustrial, as como prevencin de plagas y enfermedades.
Aprovechar las oportunidades de los mercados en expansin tanto en
fresco como industrial requiere aumentar los niveles de competitividad de la
produccin nacional, con variedades pertinentes, disminucin de costos de
produccin y mejoramiento de la calidad.
El desarrollo futuro del sector est en la especializacin de la oferta regional
con base en la identificacin nichos productivos buscando la diferenciacin
de productos de alta calidad con orientacin exportadora, tales como el esquema de marcas oficiales, sello verde u orgnico, las indicaciones geogrficas:
denominaciones de origen (D.O.) e indicaciones de Procedencia (Decisin
/ 43 /

Pedro F. Aguilar Nio, Manuel Jos Escobar Quijano, Catarina Pedro Pssaro Carvalho

486 de 2000 de la Comunidad Andina); respaldadas por certificaciones imparciales e independientes, que asegura al consumidor que el producto que
est adquiriendo es de calidad superior.
Los rasgos que caracterizan y dirigen hoy da las relaciones de comercio
agroalimentario entre los pases y bloques econmicos de mayor peso a nivel
mundial son: la prevalencia de productos con trazabilidad, sanidad e inocuidad garantizadas y certificadas; y atributos de calidad que permiten fortalecer
la competitividad de los productos alimentarios.
El crecimiento del sector citrcola colombiano estar determinado en gran
parte por el desarrollo de la capacidad exportadora, que slo se dar sobre la
base de un complejo agroindustrial organizado y una estructura empresarial
eficiente.
Para esto es necesario tener un mejor conocimiento de las caractersticas de
los mercados internacionales, en cuanto a variedades, calidades, presentaciones y normas tcnicas y de calidad, que proporcionen mejor informacin para
el desarrollo de nuevos mercados.
El gobierno debe proveer las condiciones necesarias para el desarrollo del
sector, especialmente en el tema de servicios de financiacin, crdito, investigacin y desarrollo, infraestructura, apoyo a inversiones, incentivos, sanidad,
promocin de calidad, certificacin y practicas ambientales, entre otros instrumentos.
Ampliar el rea de cultivo bajo esta perspectiva, necesita un adecuada planeacin, condiciones tecnolgicas que garanticen las variedades adecuadas,
altos rendimientos, calidad y precios competitivos. La organizacin de los
productores es definitiva para consolidar la oferta, con cantidad, continuidad
y calidad, de manera sostenible ante la demanda de actores de creciente importancia como los supermercados y desarrollar un mejor encadenamiento
del sector primario y la agroindustria.
La agroindustria necesita abastecerse de materia prima que compita en
calidad y precio con el producto importado, lo cual requiere que la produccin nacional reduzca sus costos de produccin y cambie la percepcin
del riesgo, prefiriendo estabilidad (con precios garantizados) frente a altas
fluctuaciones, con oportunidades de grandes prdidas o de grandes ganancias. Asimismo, la industria debe ofrecer en el mediano plazo, condiciones
de permanencia para garantizar la inversin de los agricultores y el cumplimiento de los contratos.
/ 44 /

Situacin actual de la cadena de ctricos en Colombia: limitantes y perspectivas

La dinmica que estn adquiriendo las grandes cadenas de supermercados en la comercializacin de ctricos, exigen departe del agricultor, producciones planificadas, tecnificadas y competitivas, que ofrezcan calidad,
buenos precios, y que cumplan con las exigencias de los consumidores
finales que prefieren frutos jugosos, dulces, de buen tamao y color, y
libres de semillas.
El desarrollo de infraestructura y constantes mejoras de la logstica del
transporte les permitir a los productores y comercializadores abastecer los
mercados con productos ctricos frescos de alta calidad durante todo el ao.
Tambin les permitir a los productores de los ctricos procesados proveer
productos convenientes y a precios razonables a los consumidores.
La demanda mundial de productos ctricos continuar creciendo, y las
perspectivas a largo plazo para los citricultores son positivas y requieren de
ajuste en aquellos sectores de bienes importados, sobre los cuales la competencia internacional ejerce las mayores presiones.
Referencias bibliogrficas
1. CARDONA, J. y RODRGUEZ, A.. La citricultura en el eje cafetero. Manizales: CORPOICA, 1997.
2. CANO, A.; MEDINA, A. y BERMEJO, A. Bioactive compounds in different
citrus varieties. Discrimination among cultivars. En: Journal of Food Composition and Analysis, 2008. Vol. 21, p. 377 381.
3. DIRECCIN NACIONAL DE MERCADOS. Situacin del mercado internacional de ctricos. [En lnea]. Direccin de Mercados Agroalimentarios. rea
Mercados de Frutas, 2009. [Citado el 5 de noviembre de 2011]. Url disponible
en: http://www.caceper.com.ar/noticias.asp?Id=1780.
4. FEDERACIN ARGENTINA DEL CITRUS El comercio mundial de ctricos crecera un 7% el 2011. [En lnea]. FEDERCITRUS, 2011. [Citado el 19
de noviembre de 2011]. Url disponible en: http://www.agronota.com/noticia.
php?id=172.
5. FOOD AND AGRICULTURE ORGANIZATION. FAO statistics. The Statistics Division. Major food and agricultural commodities and producers. [En
lnea]. Food and Agricultural Organization of the United Nations. Economic
and Social Department, 2008. [Citado el 10 de noviembre de 2011]. Url disponible en: www.fao.org/es/ess/top/topproduction.html .
6. FEDERACIN ARGENTINA DEL CITRUS. La Actividad Citrcola Argentina. Buenos Aires, Argentina: FEDERCITRUS, 2011. 18 p.
/ 45 /

Pedro F. Aguilar Nio, Manuel Jos Escobar Quijano, Catarina Pedro Pssaro Carvalho

7. FAVIR Database. APHIS Fruits and Vegetables Import Requirements United


States Department of Agriculture. Animal and Plant Health Inspection Service,
2011. [Citado el 21 de agosto de 2011]. Url disponible en: https://epermits.aphis.
usda.gov/manual/index.cfm?CFID=114782&CFTOKEN=c371bfeef2e162f5E613BA05-BA6D-EADB BA72CDC0351F64D1&ACTION=pubHome
8. UNITED STATES DEPARTMENT OF AGRICULTURE - AGRICULTURAL MARKETING SERVICE. Fruit and Vegetable Market News Branch. National Fruit and Vegetable Retail Report. November 2011. Vol. V No. 45, 22
p. [Citado el 15 de noviembre de 2011]. Url disponible en: www.marketnews.
usda.gov/portal/fv and http://www.ams.usda.gov/mnreports/fvwretail.pdf.
9. IMBERT, E. Winter citrus 2007-08 season report: detail by type of fruit. Closeup Citrus. En: FruitTrop. 2008. N161, p. 18. [Citado el 27 de noviembre de
2011]. Url disponible en: http://passionfruit.cirad.fr.
10. CENTER FOR THE PROMOTION OF IMPORTS FROM DEVELOPING
COUNTRIES CBI. Ministry of Foreign Affairs. Fresh limes in The Netherlands. 2011. [Citado el 24 de noviembre de 2011]. Url disponible en: http://
www.cbi.eu/marketinfo/cbi/?action=findDocuments&product=6&market=10
&search=Go.
11. UNITED STATES DEPARTMENT OF AGRICULTURE - NATIONAL
AGRICULTURAL STATISTICS SERVICE. Citrus Fruits. 2011 Summary. 35
p. [Citado el 24 de noviembre de 2011]. Url disponible en: http://usda.mannlib.cornell.edu/usda/current/CitrFrui/CitrFrui-09-22-2011.pdf .
12. SANCHEZ, C. World: The prices of fruit juices and pulps in Europe. En: International Press Review. FruitTrop 2008. N161, p. 2. [Citado el 27 de noviembre
de 2011]. Url disponible en: http://passionfruit.cirad.fr.
13. SPREEN, T. Panorama mundial en el 2010. En: Citrinotas. 2010. N44, p. 2831. [Citado el 05 de noviembre de 2011]. Url disponible en: www.procitrus.org/
pdf/citrinotas/citrinotas_44.pdf.
14. ORDUZ, J.O., et al. Caractersticas de la citricultura del departamento del
Casanare y recomendaciones para su mejoramiento productivo. Villavicencio,
Meta: CORPOICA, 2008. 90 p.
15. RED DE INFORMACIN Y COMUNICACIN ESTRATGICA DEL
SECTOR AGROPECUARIO AGRONET. Anlisis-Estadsticas. Colombia:
AGRONET, 2011. [Citado el 25 de noviembre de 2011]. Url disponible en:
http://www.agronet.gov.co.
16. MINISTERIO DE AGRICULTURA Y DESARROLLO RURAL. Observatorio Agrocadenas Colombia. Documento de trabajo no. 107. La cadena de ctricos en colombia: Una mirada global de su estructura y dinmica 1991-2005.
/ 46 /

Situacin actual de la cadena de ctricos en Colombia: limitantes y perspectivas

Bogot D.C. : El Ministerio, 2005. 64 p. [Citado el 06 de agosto de 2011]. Url


disponible en: http://www.agrocadenas.gov.co.
17. MINISTERIO DE AGRICULTURA Y DESARROLLO RURAL y FONDO
NACIONAL DE FOMENTO HORTOFRUTCOLA. Acuerdo de Competitividad de la Cadena Productiva de los Ctricos en Colombia. Bogot: El Ministerio y ASOHOFRUCOL, 2002.
18. CORPORACIN COLOMBIANA INTERNACIONAL. Mercado nacional
de frutas y hortalizas. Monitoreo de Mercado, 2003. N 5, 8 p.
19. United States Department of Agriculture [USDA]/Economic Research Service. 2011a. Agricultural Outlook: Statistical Indicators. In: http://www.ers.usda.
gov/Publications/AgOutlook/AOTables/ (15/11/2011).
20. UNITED STATES DEPARTMENT OF AGRICULTURE - ECONOMIC
RESEARCH SERVICE. Data last updated Feb. 1, 2011. [Citado el 28 de noviembre de 2011]. Url disponible en: http://www.ers.usda.gov/Data/FoodConsumption/FoodAvailSpreadsheets.htm#fruitfr.
21. UNITED STATES DEPARTMENT OF AGRICULTURE - ECONOMIC
RESEARCH SERVICE. Changing structure of global food consumption and
trade: an introduction. 2011. [Citado el 06 de noviembre de 2011]. Url disponible en: http://www.ers.usda.gov/.

/ 47 /

/ 48 /

Captulo 2 / Chapter 2

Generalidades de los ctricos y


recomendaciones agronmicas
para su cultivo en Colombia
Javier Orlando Orduz-Rodrguez*
Diana M. Mateus Cagua**

Resumen

**

ngeniero Agrnomo, PhD.


Centro de nvestigacin La
Libertad, Corpoica, Villavicencio, Meta.
Correspondencia:
[email protected].
. A. Asistente de nvestigacin. Corpoica, C. . La
Libertad. Villavicencio

Los ctricos fueron trados a Colombia desde los inicios


de la Conquista y desde esa poca han formado parte de la alimentacin de la poblacin. En la actualidad
los ctricos (naranja, mandarina, tangelo y limas cidas)
son el segundo frutal ms cultivado en el pas despus
del banano que gran parte se cultiva para el mercado de
exportacin. En las condiciones tropicales del pas los
ctricos se cultivan desde el nivel del mar hasta los 2.000
msnm. Teniendo en cuenta la modificacin de las temperaturas influenciadas por la altitud, para los ctricos se
pueden clasificar en trpico bajo, medio y alto, lo que es
importante para la seleccin de las especies y variedades
a cultivar. Existen cinco regiones principales en donde
se cultivan los ctricos y cada una de ellas presenta diferencias en el manejo de los cultivos. En el documento
se presenta la clasificacin botnica de los ctricos, la
clasificacin hortcola de las especies y variedades cultivadas en el pas, y finalmente se hace una revisin de
los patrones usados para su cultivo. Posteriormente, se
presenta informacin sobre los requerimientos de clima
y suelo, y se hacen recomendaciones de manejo agronmico, hortcola y fitosanitario.
Palabras clave: citricultura tropical, boletn tcnico,
prcticas de manejo, variedades, patrones.
/ 49 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez, Diana M. Mateus Cagua

Overview to citrus and agronomic recommendations


for cultivating these products in Colombia
Abstract
Citrus were brought to Colombia since the conquests times and since
then they have been a part of the peoples diet. In current times citrus
(orange, tangerine, tangelo orange and acid limes) are the second most
cultivated fruit species in Colombia after bananas, and a big part of the
production is intended for foreign markets. In Colombian tropical conditions, citrus are cultivated from the sea level to 2000 meters above.
Taking into account the modification of the temperatures influenced by
altitude, citrus crops can be classified in low tropic, mid tropic and high
tropic. This classification is important to select the species and varieties
intended to cultivate. There are five main regions in which citrus are
cultivated, and each one requires a different crops management. This
document introduces the botanical classification of citrus, the horticultural classification of the species and varieties cultivated in Colombia and,
finally, a revision to the patterns used for the cultivation is made. Then,
information about the weather and soil requirements is provided and
recommendations concerning the agronomic, horticultural and phytosanitary management are given.
Key words: Tropical citrus crops, technical bulletin, management
practices, varieties, patterns.

ntroduccin
La produccin mundial de ctricos es superior a los 100 millones de
toneladas anuales; es el grupo de frutales ms cultivado en el pas para el
consumo interno y el segundo en rea despus del banano, orientado para
el mercado de exportacin. En Colombia, los ctricos se cultivan desde el
nivel del mar hasta los 2.000 msnm. La Encuesta Nacional Agropecuaria
del ao 2010 seala que existen 62.409 ha plantadas con ctricos en el pas,
de las cuales 51.665 estn en monocultivo y 10.743 en cultivos asociados;
la principal especie cultivada es la naranja que totaliza 36.943 ha (59.2%
del total), de las cuales 30.599 ha son de monocultivo (49% del total) y las
restantes 6.383 ha se encuentran asociadas en especial el caf. Las 25.466 ha
restantes estn compuestas por mandarina, tangelo, limas cidas (pajarito y
Tahit), y en menor proporcin, la toronja. La produccin anual de ctricos
/ 50 /

Generalidades de los ctricos y recomendaciones agronmicas para su cultivo en Colombia

en Colombia puede estar entre ochocientos mil y un milln de toneladas


anuales; se presentan amplias diferencias en rendimiento que puede estar
entre 10 t ha-1ao, en cultivos tradicionales (probablemente menores en
los cultivos asociados por ejemplo, con caf), a las 40 t ha-1 ao, en cultivos
tecnificados.
Los ctricos son un cultivo subtropical, pero presentan un buen comportamiento productivo en condiciones tropicales aunque con color de la cscara y
calidades internas de la fruta diferentes a las de las condiciones subtropicales,
lo que dificulta su exportacin a los mercados de los pases desarrollados, con
excepcin de la toronja y la lima cida Tahit que obtienen la mejor calidad
del fruto en condiciones tropicales.
Los ctricos fueron introducidos desde la Conquista y se han explotado
en diferentes regiones del pas desde esa poca; no obstante, la investigacin
sobre la tecnificacin de su cultivo se inici en la dcada de 1930 en la granja
experimental de Palmira y posteriormente en otros centros de investigacin y
localidades. Estos aportes se deben a tcnicos e investigadores de las diferentes
instituciones y universidades durante estos 80 aos. En este captulo se presenta un resumen de la informacin sobre las generalidades botnicas de los
ctricos, y recomendaciones de manejo agronmico y fitosanitario, tanto de la
literatura generada en el pas como de la internacional. Se ha buscado que la
informacin sea presentada de forma sencilla y con orientacin prctica para
que les sea de utilidad agricultores, asistentes tcnicos, profesores, estudiantes
y dems personas interesadas en el cultivo de ctricos en el pas.
Principales factores que limitan la productividad de los ctricos en
Colombia
Dentro de los factores tcnicos y administrativos que limitan el desarrollo
y la modernizacin de la citricultura colombiana, se encuentran: 1). Manejo
tcnico inadecuado del cultivo 2). Deficiente desarrollo empresarial-administracin 3). Altos costos de produccin y transporte 4). Escasa participacin en
el mercado de exportacin y en la transformacin agroindustrial y 5). Poco o
nulo mercadeo para el aumento del consumo interno1, 2.

En Colombia se tienen sobresalientes regiones y explotaciones productoras de ctricos; sin embargo, en el pasado se han presentado dificultades y prdidas importantes en el establecimiento de los ctricos, adems de
problemas tecnolgicos que no se han podido resolver. Dentro de los ms
importantes estn:
/ 51 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez, Diana M. Mateus Cagua

t Deficiente seleccin de reas, paisajes y lotes para el cultivo entre los que se
encuentran los requerimientos edficos y climticos.
t Escaso nmero de variedades evaluadas en los diferentes pisos trmicos
para cada especie, con nulos estudios tecnolgicos para eliminar la concentracin de la cosecha en las regiones y permitir as la consiguiente disminucin de los precios al productor; adems de la deficiente calidad sanitaria
de las plntulas comercializadas en la mayora de los viveros.
t Deficiencias en el establecimiento y manejo agrcola y fitosanitario del cultivo, en especial en los primeros aos (aplicacin de correctivos y fertilizacin, podas de formacin, riego y manejo fitosanitario).
t Altos costos de produccin que se encuentran relacionados con el excesivo
uso de agroqumicos y de mano de obra, por deficiencias en la mecanizacin de las labores del cultivo y de la cosecha.
La correcta planificacin de cada una de las labores y la toma apropiada de decisiones permitir la modernizacin de este sector agrcola de
creciente importancia en la economa colombiana. Lo anterior est relacionado con la generacin de tecnologa para las regiones productoras y la
incorporacin de procesos de innovacin a lo largo de la cadena produccin-consumo.

Clasificacin de los ctricos


Taxonoma

Los ctricos pertenecen a la familia Rutaceae y se encuentran agrupados en


la subfamilia Aurantioideae. Los gneros ms importantes son: Citrus, Poncirus y Fortunela. Las especies del gnero Citrus son las ms importantes desde
el punto de vista agronmico y representan casi la totalidad de los ctricos cultivados. El gnero Citrus ha sido clasificado por los taxnomos de diferentes
maneras.Normalmente se utiliza la clasificacin de Swingle, aunque algunas
especies denominadas por Tanaka3 tienen aceptacin. Las especies ms conocidas y cultivadas son las siguientes:
Citrus aurantifolia (Christon.) Swing. Conocido en el comercio internacional como lima mejicana, y en Colombia, como limn pajarito o de Castilla, aunque botnicamente es una lima cida.
Citrus latifolia Tanaka. Lima Tahit
Citrus aurantium L. Naranjo amargo
/ 52 /

Generalidades de los ctricos y recomendaciones agronmicas para su cultivo en Colombia

Citrus grandis (L.) Osb. Pummelo


Citrus limon (L.) Burm. Limn verdadero
Citrus paradisi Macf. Toronja o pomelo
Citrus reticulata Blanco. Mandarina
Citrus sinensis (L.) Osb. Naranjo dulce
Clasificacin hortcola de las variedades de ctricos cultivadas
Los grupos de ctricos de importancia comercial en las diferentes regiones
productoras son: las naranjas dulces, las mandarinas, las toronjas, los limones
y las limas cidas.

t Naranja dulce (C. sinensis (L.) Osbeck)


Es la especie ms importante de ctricos, si tenemos en cuenta su produccin mundial. Las variedades de naranjo dulce se dividen en cuatro grandes
grupos.
Grupo Navel
Las variedades de este grupo se caracterizan porque sus flores dan lugar
a un doble fruto. El fruto secundario est incluido en el principal y exteriormente recuerda a un ombligo (navel) lo que da nombre al grupo. No se
utilizan para agroindustria por su contenido de limonina, que confiere sabor
amargo al jugo. En el piedemonte llanero presentan bajos rendimientos y
deficiente calidad de la fruta.
Grupo Blancas
Denominadas naranjas redondas o comunes, por la ausencia de ombligo
en sus frutos. Este grupo comprende el mayor nmero de variedades; a escala
mundial, es uno de los dos grupos de mayor inters comercial, debido a su
demanda para consumo en fresco, y por la posibilidad de ser utilizada en la
fabricacin de jugos tanto enteros como concentrados.
A este grupo pertenece la naranja Valencia que, con los diferentes clones,
es la ms cultivada en el mundo. En Colombia se planta desde el nivel del
mar a los 1.200 msnm, aunque presenta su mejor comportamiento por debajo de los 800 msnm. Otras variedades del subgrupo blancas son: Hamlin,
Salustiana, Natal, Pineapple, Pera del Ro, entre otras. Las variedades de este
grupo son las que presentan mejor comportamiento en condiciones del trpico medio y clido.
/ 53 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez, Diana M. Mateus Cagua

Grupo Sanguinas
La caracterstica principal de estas variedades es que sus frutos contienen
en la pulpa y en la corteza un pigmento rojo, soluble en agua. La inclusin
de variedades de otros grupos ha generado una disminucin en el cultivo de
las variedades sanguinas en los pases productores. En Colombia son poco
cultivadas. Algunas variedades de este grupo son: Doble fina, Entre fina y
Sanguinelli.
t Mandarinas (Creticulata Blanco; y C. unshiu Marc.)
Los ctricos de este grupo estn compuestos por numerosas especies, as
como hbridos intergenricos e interespecficos4. El grupo de las mandarinas
se caracterizan por tener en comn su fcil pelado; son rboles de mediano
porte, muy ramificados, flor pequea, abundante, y con frecuencia presentan
tendencia a la alternancia. Debido a su facilidad para el consumo en forma
directa, lo atractivo de su presentacin, y las ventajas que tiene para la salud
el consumo de la fruta completa ha ganado importancia en el mercado de las
frutas frescas de la mayora de las regiones citrcolas del mundo.
Existen varias clasificaciones del grupo de las mandarinas: Swingle5 reconoce 3 especies; Tanaka3 reconoce 36; mientras que Davies y Albrigo6 dividen
el grupo en mandarinos verdaderos (3 subgrupos) y los hbridos de mandarino (naturales y realizados por el hombre).
Grupos de mandarina Satsuma
Botnicamente se clasifican como Citrus unshiu Marc.;son plantas adaptadas a las regiones subtropicales de bajas temperaturas, producen frutos pequeos que poseen escaso mercado en los pases tropicales, en donde los consumidores prefieren frutas grandes. Algunas de estas son: Okitsu, Satsuma Owari,
Clausellina, entre otras.
En este grupo los rboles son de tamao entre pequeo y mediano, con
hbito de crecimiento abierto y pendular. Esto hace que estn bien aireados
y reciban bastante luz para producir mandarinas de calidad7. Los frutos de la
mayora de los cultivares no tienen semillas. En Colombia su cultivo no presenta importancia comercial, aunque deberan evaluarse en el trpico alto por
encima de los 1.500 msnm.
Mandarinas del grupo Mediterrneo
Conocidas tambin como Citrus deliciosa, comprende variedades de la
India y del sur de China, bien adaptadas al clima templado mediterrneo.
/ 54 /

Generalidades de los ctricos y recomendaciones agronmicas para su cultivo en Colombia

Algunas variedades conocidas son: Avana, China, Willowleaf , Comn


de Argentina. Aunque en las ltimas dcadas han perdido importancia, este
grupo sigue siendo ampliamente cultivado en Italia y Brasil. Ramrez8 la reporta como cultivada en Venezuela, aunque no menciona su importancia ni
su comportamiento productivo.
Grupo del mandarino comn
C. reticulata Blanco. Es el grupo de mandarinos ms cultivados a escala
mundial. Son variedades adaptadas a las altas temperaturas y se cultivan en
reas subtropicales y tropicales. La Dancy es una variedad muy comn en
Estados Unidos y se adapta bien en el trpico. Dentro de este grupo tambin
se encuentran las mandarinas del subgrupo de las clementinas; este es el grupo
de mayor aumento en produccin y consumo en el mercado de exportacin
de los pases desarrollados. En Colombia hay cultivos comerciales de clementinas con resultados preliminares no tan favorables sobre su comportamiento
sanitario, rapidez de maduracin en el rbol y baja demanda debido a su tamao, ya que el mercado interno prefiere frutas grandes.
Teniendo en cuenta las caractersticas de los rboles, sus hbitos de floracin y las caractersticas de los frutos, se cree que las variedades sembradas
en Colombia se clasifican en este grupo en el cual tambin se encuentra la
mandarina arrayana.
Hbridos de mandarino
Este grupo est compuesto por hbridos naturales con apariencia de mandarina en sus frutos como los tangor (hbridos entre naranja y mandarina; C.
sinensis x C. reticulata); dentro de este grupo los ms conocidos son la mandarina Temple y el tangor Murcott, cultivados en la actualidad en Florida. En
este grupo se encuentran los tangelos Orlando y Minneola (cruce de C. reticulata x C. paradisi), plantados en Colombia, aunque en las ltimas dos dcadas
este ltimo ha perdido inters debido a su susceptibilidad a Alternaria.
t Toronja (C. paradisi Macf.)
La toronja (C. paradisi Macf.) es conocida tambin como pomelo. Parece ser
que no es una especie verdadera sino un hbrido natural entre el pummelo y la
naranja dulce9. El principal productor y consumidor es Estados Unidos. Tiene
altas exigencias en calor y su cultivo se circunscribe a las regiones tropicales y
subtropicales hmedas. Existen dos tipos de toronja: las de carne blanca, de las
cuales las variedades ms conocidas son Duncan y Marsh; y las de carne rosada
o roja, dentro de los cuales estn Star Ruby, Red Blush, Ro, entre otras.
/ 55 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez, Diana M. Mateus Cagua

t Limas cidas (C. aurantifolia L. y C. latifolia Tanaka)


Son cultivos de origen tropical y es en el trpico donde presentan su mejor
comportamiento en produccin y calidad. De todas las especies ctricas cultivadas son las ms susceptibles a heladas10. Existen dos especies que se cultivan
en Colombia: el limn pajarito o de Castilla (C. aurantifolia L.); y la lima
Tahit (C. latifolia Tanaka). Esta ltima presenta una buena demanda en el
mercado internacional y buenos precios en el mercado interno, mientras que
el pajarito posee demanda solo en los mercados regionales debido a su rpido
deterioro en poscosecha.
Copas y patrones en Colombia
En el pasado, los rboles de ctricos fueron multiplicados por sus semillas.
Estos rboles sin injertar se conocen como francos. Las plantas francas presentan un largo perodo de juvenilidad que puede durar entre 7 y hasta ms
de 10 aos. En este periodo las plantas son vigorosas, desarrollan espinas,
no florecen y son improductivas. Adems, son susceptibles a los ataques de
hongos y otros problemas sanitarios; tambin, en caso de cultivares con bajas
tasas de embriona nucelar, las plantas pueden ser diferentes a los parentales.
Teniendo en cuenta que en la citricultura moderna es necesario un rpido
retorno de la inversin, este tipo de cultivos ya no presentan inters para los
productores, por lo que se encuentran solo en pequeos huertos de autoconsumo.
El injerto es una forma particular de reproduccin asexual, que se utiliza
en gran escala en la citricultura. En esta tcnica se unen segmentos de la planta madre (yema que conformar la copa) sobre tallos de plantas receptivas
ms resistentes (patrn o porta injerto) de la misma especie o de una muy
cercana. Contrario a lo que sucede en las plantas propagadas por semillas, las
plantas propagadas por injerto reproducen, por medio de la duplicacin del
ADN, toda la informacin gentica de la planta progenitora. Estos individuos
con caractersticas uniformes son conocidos como clones, y en horticultura se
igualan a una variedad.

Variedad o Copa
Hace referencia a la parte area de la planta que posee valor agronmico y
que se quiere cultivar; en este caso nos referimos a las variedades de naranjas,
mandarinas, limas (pues en Colombia no se siembran limones verdaderos
en forma comercial) o hbridos. La seleccin de la variedad a injertar debe
/ 56 /

Generalidades de los ctricos y recomendaciones agronmicas para su cultivo en Colombia

ir acorde con la regin en la que ser establecido el cultivo, as como con las
condiciones ambientales y edficas, y la demanda del mercado.
Colombia es un pas tropical, en el que se encuentran rboles ctricos en
produccin en zonas desde el nivel del mar hasta el lmite superior de la zona
cafetera11, 12. No todas las variedades se adaptan a las diferentes condiciones
que se pueden presentar en las zonas citrcolas del pas. A continuacin se
presenta una revisin de las variedades y patrones cultivados en el pas.
Las variedades ms cultivadas comercialmente en Colombia son: en naranjas, diferentes clones de Valencia, la Sweety, y con menor rea la Salustiana, la Frost Washington y algunas selecciones de materiales regionales; las
mandarinas Oneco y Arrayana, y en menor escala, la Clementina y Dancy;
en limas cidas, el limn Pajarito, y la lima Tahit; en tangelo, el Minneola
yel Orlando.
Sin embargo, estas no son las nicas variedades cultivadas. En el territorio
nacional hay ms de 20 materiales de naranja, 10 materiales de hbridos y 10
de mandarina que han sido evaluados para copa, y ms de 10 variedades como
patrones.
Naranja
El grupo de naranjas blancas, tambin llamado redondas, ha sido el grupo
de naranjas con mejor comportamiento en el trpico. Son plantadas en las diferentes regiones del pas teniendo en cuenta que esta fruta es la que presenta
la mayor demanda tanto para el consumo en fresco como de jugos caseros.

Dentro de este grupo encontramos la naranja Valencia; esta es la naranja


dulce tarda mas cultivada en las principales regiones citrcolas del mundo
y en Colombia. Ros, G. et al.13 afirman que en el suroccidente y en el Eje
Cafetero, el 83% del rea cultivada en naranja corresponde a Valencia, y el
27% restante, a otras variedades como la Sweety y Salustiana (entre otras);
tambin es la variedad de naranja que ms se cultiva en el piedemonte llanero. De acuerdo con la encuesta nacional agropecuaria ENA, en el ao
2010 el rea establecida en el Meta era de 6.277 ha en naranja.Se estima que de estas, el 90% corresponde a Valencia y el 10% restante a otras
variedades,mientras que en la zona bananera y Aracataca (regin centro del
Caribe colombiano), Pez, et al.14, afirmaron que esta variedad (Valencia)
ocupaba el segundo lugar con 28.6% del rea sembrada, el primer lugar
corresponda a Margaritera (clon criollo) con el 50%, el 7.1% a ombligonas
y el 14.3% a otras.
/ 57 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez, Diana M. Mateus Cagua

En la tabla 1, se presenta la influencia de la seleccin del genotipo de


naranja en condiciones tropicales con alta acumulacin de unidades de calor
acumuladas al ao que es de 4930 para el piedemonte del Meta. Se considera que el 0 biolgico de los ctricos es de 12.5 C, por lo que las temperaturas medias diarias por encima de esa temperatura se acumulan en el ao.
Como comparacin se puede mencionar que Valencia en Espaa acumula
1.600 uc al ao15.
Tabla 1. Produccin acumulada de 5 cosechas (Kg rbol-1)
de cultivares de naranja en el C.. La Libertad. Villavicencio*
Cultivar

Produccin
acumulada

Cultivar

Produccin
acumulada

Cuban Queen

145,3

Lerma

49,4

Pera de Ro

131,7

Pinneaple

42,9

Pinneaple II

114,6

Nativa Naranjal

42,9

Enterprise

114,1

Rico

34,6

Salerma

95,3

Salustiana

29,8

Naranjal Excelente

91,9

S.R. 7

29,0

Madame Vinois

89,1

Garca Valencia

28,9

Galicia

81,8

V. Washington II

22,5

Hamlin

78,7

V. Washington

9,2

Naranjal Ombligona

77,5

Atwood navel

3,5

Palmira Ruby

77,0

Lane late

Parson Brown

64,4

Moro Blood

S.R. 8

62,5

Jaffa

*Patrn: mandarina Cleopatra


S.R. Selecciones regionales

Se considera que las plantas por encima de 80 Kg por rbol presentan


buena adaptacin, mientras que los de un rendimiento menor pueden
tener inters en el trpico medio incluyendo las naranjas de ombligo. En
la evaluacin se identificaron tres variedades que no produjeron frutos, lo
que corrobora la escasa adaptacin de naranjas comunes en su cultivo en
Israel o Espaa.
/ 58 /

Generalidades de los ctricos y recomendaciones agronmicas para su cultivo en Colombia

Adicionalmente se han evaluado diferentes variedades de naranja en el


pas. Actualmente hay registro de experimentos ejecutados en la regin Caribe, en Caicedonia (Valle del Cauca) y en el Piedemonte del Meta, que
tienen el fin de seleccionar materiales promisorios que permitan ampliar la
poca de cosecha con el desarrollo de nuevas variedades para los diferentes
pisos trmicos.
En la tabla 2, puede apreciarse que las variedades evaluadas en Caicedonia
estuvieron por encima de los estndares de calidad aceptable (tabla 3) para la
industria en grados Brix y acidez; aunque el contenido de jugo estuvo un poco
bajo en las variedades Pera del Ro, Galicia y Lerma.
Tabla 2. Anlisis de calidad de diferentes variedades de naranjas
en pruebas regionales Granja Venecia. Caicedonia (Valle del Cauca)
Cultivar

% Jugo

Brix

% Acidez

Ratio

Salustiana

45

10.6

0.9

11.7

Haffa

43

10.2

1.0

10.2

Hamlin Nucelar

49

10.5

0.8

12.5

Pera del Rio

35

9.3

0.5

17.5

Galicia

38

9.2

0.5

18.4

Lerma

35

9.6

0.6

15.2

Fuente: Caicedo, A.; et al16

Tabla 3. Caractersticas de calidad para naranjas,


tangelos y mandarinas
Slidos
solubles (Brix)

Acidez

Jugo

Excelente

> 12

Excelente

> 1.25

Excelente

> 55

Muy bueno

11

Muy bueno

1.00

Muy bueno

50

Bueno

10

Bueno

0.75

Bueno

45

Corriente

Corriente

0.50

Corriente

40

Pobre

< 35

Pobre

<8

Pobre

< 0.25

Fuente: Caicedo, A.; et al16

/ 59 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez, Diana M. Mateus Cagua

Mandarinas
El nmero de variedades de mandarina es reducido para algunas zonas del
pas, ya que las variedades por lo general son muy especficas en los requerimientos climticos para producir y obtener frutos de buena calidad.

En este contexto encontramos los rangos de adaptacin de algunos materiales de mandarina disponibles para ser plantadas en Colombia:
Tabla 4. Variedades de mandarina disponibles
para ser cultivadas en Colombia.
Mandarina

Adaptacin (msnm)

Dancy

400-1100

Oneco

600-1500

Arrayana

400-1200

Satsuma

1000-1500

Clementina

1000-1600

Reina

400-1100

Satsuma

800-1500

Comn o China

800-2000

Fuente: Corrales17

Dancy, Oneco, Reina, Arrayana y Comn son las principales variedades


cultivadas en Santander. En el 2004 este departamento se situaba en el primer
lugar como productor de mandarina comn en Colombia con cerca de 4.200
hectreas sembradas18 y solo 77 hectreas en Arrayana. Ms del 95% del rea
plantada con mandarina en el piedemonte llanero es de la variedad Arrayana,
mientras que el 5% restante son de cultivares criollos y Oneco. Esta ltima
variedad es la dominante en todo el occidente colombiano en especial en la
citricultura de Antioquia, Valle y Eje Cafetero.
Las observaciones realizadas en el C. I. La Libertad (piedemonte del Meta)
muestran que Satsuma, Ponkan California y Oneco presentan problemas en
la calidad externa del fruto; su rango de adaptacin es limitado y no son recomendadas en condiciones de trpico bajo, mientras que Dancy ha mostrado muy buena adaptacin a estas condiciones con el mejor rendimiento por
planta y con buena calidad de fruta. En la tabla 5 se presentan los resultados
/ 60 /

Generalidades de los ctricos y recomendaciones agronmicas para su cultivo en Colombia

de 6 cosechas (2000-2009) para este material, contrastado con la variedad


regional (ambas injertadas sobre Cleopatra). (figura 1).

Figura 1. Plantas y frutos de mandarina Arrayana (A) y mandarina Dancy (B),


en lotes experimentales del Centro de nvestigacin La Libertad
(Villavicencio, Meta).
Tabla 5. Rendimiento anual (Kg/ rbol) y caractersticas del fruto de dos
variedades evaluadas en el piedemonte del Meta. Promedio de 6 cosechas
Variedad

Kg/rbol

t/ha
(250 plantas/ha)

Brix

SST/ATT

% Jugo

Arrayana

75.7

18.9

8.13

13.5

39

Dancy

91

22.8

11.9

38

El mercado de las mandarinas comparado con el de los dems frutos ctricos es el de mayor aumento en el mbito mundial, debido a su facilidad de
pelado, sabor y contenido nutricional. El pas debe ampliar su rea plantada
con mandarinas en los prximos aos; sin embargo, es conveniente que estos
cultivos sean realizados con nuevas variedades que preferiblemente presenten
/ 61 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez, Diana M. Mateus Cagua

la cosecha en una poca complementaria a las variedades usadas en la actualidad, con el fin de evitar la sobreoferta de fruta y la consiguiente disminucin
de precios para los productores.
Tangelo
Las principales variedades de tangelo cultivadas en Colombia son: Minneola y Orlando. Estas pueden ser sembradas desde los 0 hasta los 1.400
msnm. De Minneola se han reportado rendimientos de cerca 13 t ha-1 en
condiciones del piedemonte del Meta19 y valores semejantes en Antioquia
por Agronet con 10 t ha-1, mientras que en Lejanas (Meta) se han obtenido
producciones comerciales por encima de 50 t ha-1.

Una de las principales limitantes para el cultivo del tangelo Minneola es


la enfermedad causada por Alternaria sp. La susceptibilidad de este hbrido ha
ocasionado la eliminacin de cerca de 3.000 hectreas de tangelo Minneola,
en la zona del centro occidente del pas20.
El tangelo es de los pocos ctricos que requieren polinizacin cruzada y, por
tanto, necesita el establecimiento de plantas polinizadoras dentro del huerto.
En los Llanos se utiliza la mandarina Arrayana, aunque es probable que se
puedan utilizar otras variedades. Se recomienda el uso de una fila de mandarina cada 8 o 10 filas de tangelo; esta distribucin debe ser realizada en la fase
de planeacin previa al establecimiento del cultivo.
Limones y limas cidas
En Colombia se cultivan poco los limones verdaderos (C. limon); los cultivares plantados, si bien se conocen como limones pertenecen al grupo de limas
cidas, dentro de las que estn el limn pajarito y la lima cida Tahit como los
ms cultivados. Las producciones de estos cultivos estn entre 15 y 40 t ha-1.

La lima Tahit fue introducida a Colombia en Palmira (Valle) en 1941. Sus


frutos no producen semilla debido a que es un triploide y no produce polen
viable. Es de color verde entre mediano y oscuro, de forma semi-redonda a
ovalada, su peso vara entre 50 y 100 g. Aunque se caracteriza por su alta productividad y precocidad, ha tenido serios problemas fitosanitarios con CTV
(virus de la tristeza de los ctricos).En condiciones del piedemonte del Meta,
Quiroga et al.21, afirmaron que del sexto ao de establecido el cultivo al ao
nmero 11, la incidencia de CTV pas del 16.5% al 100% y la severidad del
29.4% al 84%. Estos problemas fitosanitarios han reducido el ciclo de vida
de las plantas de 20 aos (ciclo productivo de una plantacin en buen estado
fitosanitario) a 8 aos, afectando gravemente la economa del cultivo.
/ 62 /

Generalidades de los ctricos y recomendaciones agronmicas para su cultivo en Colombia

Actualmente el C.I. Palmira ha implementado la tcnica de micro-injerto


de pices caulinares, yemas libres de virus de la tristeza (CTV), las cuales han
sido distribuidas a viveristas registrados de diferentes regiones del pas.

Patrones
El patrn influye sobre 20 o ms caractersticas frutcolas dentro de las que
estn: altura, vigor y enraizamiento de la planta; la tolerancia a los factores
abiticos como dficit hdrico, bajas temperaturas, salinidad, acidez de los
suelos o exceso de agua; la resistencia o tolerancia a enfermedades tales como
las enfermedades sistmicas (CTV, ECV, Psoriasis y Caquezia) o Phytophthora;
y rendimiento de fruta, tamao, textura, calidad interna y fecha de madurez22.
Wutscher y Bistline23 mencionan que la seleccin de los patrones ha contribuido, quiz ms que ningn otro factor, al xito o al fracaso de la industria
ctrica en cualquier regin del mundo. La seleccin del patrn a utilizar es de
gran importancia en el establecimiento del cultivo, pues es el patrn quien
aporta el sistema radicular de la planta y este es el responsable de la absorcin
y transporte de nutrientes. Los patrones son los que soportan las condiciones
particulares del suelo (contribuyendo o no a la adaptacin de variedades), y
pueden conferir tolerancia o resistencia a hongos y a enfermedades sistmicas
ocasionadas por virus o viroides24.
De acuerdo con Jaramillo25, entre 1932 y 1941 se realizaron las primeras
recomendaciones de patrones para ctricos dentro de las que estaban el naranjo
agrio (Citrus aurantium L.) y el limn rugoso (C. jambhirii Lush); hacia 1951 se
inician los estudios con mandarina Cleopatra y en 1955 se hace la introduccin
de Citrange Troyer. En la dcada de 1970 se inicia la evaluacin de patrones
en los centros de investigacin de Palmira, Medelln (Tulio Ospina) y Espinal
(Nataima); y a partir de 1997 en el C.I. La Libertad en Villavicencio.
A continuacin se mencionan las principales caractersticas de los patrones
ms usados en la citricultura colombiana.
Mandarina Cleopatra. Es tolerante a Phytophthora, xiloporosis, psorosis
y exocortis. Se destaca por su resistencia a la alcalinidad y salinidad del suelo,
tambin por su tolerancia a la sequa y exceso de agua; promueve frutos de
buena calidad y un buen desarrollo vegetativo de la copa. Su particularidad
de inducir tarda entrada en produccin, debido a su desarrollo radicular y
reduccin del tamao del fruto en plantas adultas, seala la necesidad de desarrollar otros patrones que superen los limitantes de Cleopatra.
/ 63 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez, Diana M. Mateus Cagua

Limn Volkameriana (Citrus volkameriana Pasquale). Es muy vigoroso, es


tolerante a enfermedades de los ctricos como Phytophthora, CTV, caquezia y
exocortis. Induce copas productivas aunque la calidad de la fruta es inferior a
las copas injertadas sobre otros patrones. Es el ms usado en Colombia para la
produccin de la lima Tahit debido a su rpida entrada en produccin, pero le
proporciona un color verde plido a la fruta lo que limita su demanda para el
mercado de exportacin que busca prefieren el color de la corteza verde intenso.
Sunki x English (SxE). Es un hbrido intergenrico de C. sunki Hort. ex
Tan. x P. triofoliata (L.) Raf., evaluado y utilizado primordialmente en condiciones nacionales. Es de porte medio y buena eficiencia productiva. En el
piedemonte llanero ha tenido sobresaliente comportamiento con naranja Valencia y ha sido uno de los mejores con el tangelo Minneola.
Sunki x Jacobson (SxJ). Al igual que el anterior es un hbrido intergenrico; es un patrn con caractersticas parecidas a las del SxE, que permanece en
evaluacin tanto en la zona cafetera como en los llanos orientales.
Estos dos hbridos constituyen los portainjertos ms resistentes a Phytophthora probados en Colombia, aunque son susceptibles a exocortis y a suelos
salinos.
Lima Rangpur (denominado por Webber Citrus limonia Osbeck y, por
Swingle Citrus reticulata var. austera. En Brasil, donde es ampliamente utilizada, es conocida por limao Cravo. Este patrn induce generalmente en los
cultivares alto vigor y produccin. Aunque es tolerante a CTV (puede ser susceptible a razas severas), es susceptible a Phytophthora, exocortis y xiloporosis;
se le considera como resistente a la sequa.
Citranges. Son hbridos del cruce de naranja Washington navel (Citrus
sinensis) x naranja trifoliada (Poncirus trifoliata). Los ms conocidos en la actualidad son Carrizo y Troyer. En general, las variedades injertadas sobre
ellos son vigorosas, de rpido desarrollo y tamao uniforme, mejoran el tamao y acidez del fruto; son susceptibles a presentar deficiencia de zinc debido a
la distribucin de su sistema radical (esto es caracterstico de los patrones que
provienen de la naranja trifoliada).
Citrumelos. Son hbridos del cruce naranja trifoliada x pomelo (Citrus
paradis). El ms representativo en el pas es el citrumelo Swingle (tambin
conocido como CPB 4475). Es tolerante a tristeza, xiloporosis y Armillaria y
resistente a Phytophthora, pero susceptible a exocortis y a suelos salinos. Se
adapta bien a suelos arenosos o limosos.
/ 64 /

Generalidades de los ctricos y recomendaciones agronmicas para su cultivo en Colombia

Otras variedades de naranja trifoliata que han sido estudiadas en Colombia


como patrn son: Trifoliado Rich 21-3, Kryder 15-3 y English Large. Estos
materiales inducen un enanismo moderado en las copas injertadas sobre ellos.
Son tolerantes a tristeza, psorosis, xiloporosis y Phytophthora. No se adaptan
a suelos salinos.
De acuerdo con el efecto de diferentes patrones sobre el porte de los rboles Corrales17 y Arango et al.26 los clasifican en: 1. Porte alto: limn rugoso,
Cleopatra, Volkameriana, lima Rangpur, naranja nativa; 2. Porte medio: Troyer, Carrizo, SxE, SxJ, CPB 4475; 3. Porte bajo: Flying dragn, trifoliado Rich
21-3, Kryder 15-3 y English large.
En la zona cafetera se reporta que S x E, Lima Rangpur, S x J, Volkemeriana y Cleopatra fueron los patrones (de 13 evaluados) que indujeron mayor
produccin en naranja Garca Valencia (con valores promedio entre 234.7
Kg rbol-1 y 202.4 Kg rbol-1). En este estudio se observ que los rboles de
porte bajo y mejor volumen eran ms eficientes, aunque presentaban menor produccin que los de gran porte. En este sentido se podran trabajar
densidades mayores por hectrea para obtener una produccin considerable
por superficie27, 28. En cuanto a la calidad de fruto, las plantas injertadas en
Troyer tuvieron los valores ms altos en Brix (11.3).Tambin presentaron
buen comportamiento el citrange Carrizo y los trifoliados en general (de 10.4
a 9).Otro estudio realizado por Cardona (1995) en el trpico medio de Colombia tuvo resultados similares siendo CPB 4475, Troyer y Carrizo los de
valores ms altos de calidad, mientras que en Volkameriana y L. rugoso se
presentaron los valores ms bajos.
La evaluacin de portainjertos en el piedemonte del Meta para mandarina Arrayana29, ha dejado los siguientes resultados: CPB 4475 fue el patrn
con mayor produccin de frutos acumulada, seguido de Volkameriana y
SxE. Igual orden se present en la evaluacin de eficiencia productiva. En
cuanto a calidad de fruta, todos los patrones evaluados mostraron valores
similares, con excepcin de Volkameriana el cual indujo menor calidad en
contenido de SST. Por otro lado, el mayor tamao de fruto se obtuvo con
Volkameriana y CPB 4475 seguido de SxE, mientras que Cleopatra present el menor tamao.
La mandarina Oneco fue evaluada sobre 8 patrones en la zona central cafetera; en este experimento se obtuvieron los siguientes resultados:
SxE, Kryder y Carrizo presentaron los mayores promedios de produccin, mientras que Kryder y Rich 21-3 presentaron la mejor eficiencia
/ 65 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez, Diana M. Mateus Cagua

productiva (correspondientes a patrones de bajo porte). Los portainjertos


tradicionales limn rugoso y Cleopatra presentaron altas tasas de crecimiento vertical provocando copas de alto porte, muy voluminosas y
con baja eficiencia productiva; contrario a la respuesta generada por los
trifoliolados Kryder y Rich 21-3 que presentaron portes medio-bajos con
producciones intermedias.
En lima Tahit, de los 8 patrones evaluados: Volkameriana, limn rugoso
y l. Rangpur presentaron los mayores promedios de produccin por planta
en condiciones del Eje Cafetero, mientras que con Rich 21-3 se obtiene la
mayor eficiencia productiva y un porte medio a bajo en volumen de copa.
En el piedemonte del Meta Volkameriana y SxE inducen mayor precocidad
en produccin. Sin embargo, se ha observado que el segundo produce fruto
de color verde ms intenso, lo cual puede ser de inters para el mercado de
exportacin.
Estos resultados confirman la interaccin copa-patrn, y la influencia del
patrn en las caractersticas de desarrollo vegetativo y productivo. En la tabla
6, se encuentra las principales combinaciones copa/patrn utilizadas en programas de injertacin en Colombia.
Tabla 6. Combinaciones copa/patrn en programas
de injertacin de Colombia.
Patrn | Copa

Naranjas

Citrumelo CPB
4475

Citrange Carrizo

Citrange Troyer

SxE

Mandarina
Cleopatra
Limn
Volkameriana

Mandarinas

Limones

Toronjas

Kryder 15-3

Tangelos

x
x

Lima Rangpur

Limn Rugoso

x
x

Fuente: Ros30

/ 66 /

Generalidades de los ctricos y recomendaciones agronmicas para su cultivo en Colombia

Condiciones Edafoclimticas
Clima
Si bien las principales regiones productoras de ctricos se encuentran
ubicadas en el subtrpico, entre los 23,5 y 40 de latitud en ambos hemisferios (estas regiones se conocen como los cinturones citrcolas del
mundo), las condiciones ambientales del trpico presentan caractersticas favorables para su crecimiento, desarrollo, produccin y calidad de
la fruta.

El trpico es la regin ubicada entre los 23,5 de latitud norte y sur. De


acuerdo con Orduz31, dependiendo de la altitud de la regin en la que se encuentre, este se clasifica en trpico alto (1500 a 2000 msnm), medio (800 a
1500 msnm) o bajo (0 a 700 msnm).
Los factores ambientales relacionados con la regin climtica en la que se
encuentre el cultivo tienen gran influencia sobre el crecimiento, desarrollo y
rendimiento de los ctricos. Estos son responsables en su mayor parte de la diversidad de las cifras en produccin de las plantaciones maduras, que pueden
ser tan altas como las 100 toneladas ha-1 de las zonas subtropicales o tan bajas
como las 15 toneladas ha-1 de las tropicales6.
Las condiciones fisiogrficas en Colombia proporcionan gran diversidad
de microclimas que deben ser tenidos en cuenta durante las actividades agronmicas. En frutales perennes se considera que este factor es ms crtico que
cualquier otro, pues el manejo tecnolgico del cultivo puede ajustarse hasta
cierto punto, pero las condiciones ambientales (precipitacin, temperaturas
medias mximas y mnimas- entre otras) no pueden ser controladas por el
hombre.
En Colombia, los ctricos se cultivan desde el nivel del mar hasta los 2.100
m
, aunque tienen importancia comercial hasta los 1.500-1.600 msnm.
Las temperaturas ptimas para ctricos en general en Colombia estn entre
los 18 y 30C, eligiendo para climas medios las variedades tempranas en las
regiones subtropicales, y en las clidas,
lidas,
lidas, las variedades tardas. Lo anterior seala que la seleccin de variedades (copas) y patrones debe realizarse con base
en sus requerimientos climticos y edficos, preferiblemente con evaluaciones
realizadas en condiciones ambientales cercanas a los sitios de cultivo.
11, 12

Se considera que para las regiones tropicales el principal factor inductor de


la floracin es el estrs hdrico; el perodo de desarrollo desde la flor hasta el
fruto maduro puede ser de 8-9 meses para naranja Valencia en condiciones del
/ 67 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez, Diana M. Mateus Cagua

trpico bajo de Colombia, mientras que en climas continentales de California


pueden durar hasta 16 meses. Las condiciones ambientales influyen sobre la
intensidad, duracin y distribucin de la floracin (en climas monomodales
generalmente se presenta una floracin principal al ao, mientras que en bimodales dos principales, pudindose presentar otras menores, dependiendo
de las condiciones climticas del periodo de observacin).
Suelo

Luego de seleccionar la regin en la que se establecer el cultivo de ctricos


teniendo en cuenta las condiciones ambientales ya mencionadas, es necesario
hacer un anlisis de las caractersticas y propiedades del suelo, con el fin de determinar qu tratamiento especifico es necesario realizar previo al transplante
y si es rentable o no hacerlo, pues aunque los ctricos se adaptan a amplias
condiciones, no significa que lo hagan de forma ptima en cada una de ellas.
Muchas de las dificultades que se han presentado a escala nacional en la
mayora de los cultivos frutales se deben a que la planificacin de las actividades
no se hace con base en los diagnsticos edficos especficos para la localidad y la
variedad, sino que prevalece la prctica cultural tradicional, que finalmente se
ve reflejada en los bajos rendimientos o, inclusive, la prdida total del cultivo.
Al momento de analizar las caractersticas edficas, las propiedades fsicas
son ms importantes que las qumicas, pues son ms difciles de modificar.
Las condiciones edficas ideales para un cultivo de ctricos son: que tenga
textura limo-arenosa, que sea bien drenado y profundo; la permeabilidad y la
profundidad efectiva son dos factores muy importantes.
Las races pueden profundizar hasta aproximadamente 6m y desplazarse en
un radio similar (figura 2). Sin embargo, las races absorbentes se encuentran
superficialmente entre los 0 y 30 cm de profundidad, razn por la cual la
zona de plateo debe ser cuidadosamente tratada; debe evitarse el crecimiento
de arvenses que puedan competir con las races del cultivo en la absorcin de
nutrientes, y de capas endurecidas que puedan impedir el crecimiento de la
raz, proporcionando mal anclaje y deficiente absorcin de agua y elementos
minerales.
La humedad del suelo es determinante en el desarrollo de las races. Esta
permite que sus funciones bsicas fundamentales, como respiracin, transporte de nutrientes, almacenamiento de carbohidratos, etc., se lleven a cabo
con normalidad; es importante que las demandas de humedad sean suplidas,
ya sea por la retencin natural del suelo (lo cual ocurre con un suelo de per/ 68 /

Generalidades de los ctricos y recomendaciones agronmicas para su cultivo en Colombia

meabilidad adecuada) o por medio de la aplicacin de riego. El encharcamiento continuo es uno de los principales enemigos de la planta ctrica y debe
ser uno de los factores a considerar en la seleccin del lote seleccionado para
establecer el cultivo.

Figura 2. Perfil de suelo y distribucin de races en un lote de mandarina


Arrayana de 14 aos en el C.. La Libertad, Piedemonte del Meta.

Ya que la citricultura es una actividad de largo plazo y que requiere importantes inversiones de capital, es fundamental que antes de establecer el cultivo se
haga una adecuada planeacin de las actividades de la inversin. Los factores a
tener en cuenta antes del establecimiento del huerto pueden agruparse en tres:
estudio de mercados, condiciones ambientales y aspectos tcnicos. Estos tres factores
estn profundamente ligados y no debera omitirse ninguno de ellos.
Dentro de los aspectos tcnicos del cultivo relacionados especficamente
con la planeacin del cultivo estn:
1. Anlisis de qumica y fsica de suelos, complementado con estudios de altimetra, profundidad efectiva, capas endurecidas y caractersticas del perfil
del suelo. Lo anterior se puede hacer realizando calicatas y cajuelas en el
lote seleccionado y tomando muestras de suelo para su anlisis de laboratorio; su nmero depende del tamao de la plantacin y de la heterogeneidad
de los suelos. Esta informacin permitir tomar decisiones para el manejo
de suelo (aplicacin de correctivos, fertilizantes, uso de maquinaria, etc.),
y las labores a realizar antes del trasplante del cultivo
/ 69 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez, Diana M. Mateus Cagua

2. Seleccin de la variedad y patrn a utilizar: en este anlisis se deben incluir


las caractersticas de los mercados, calidad del fruto en la regin, requerimientos para la cosecha y poscosecha, poca de recoleccin, requerimientos climticos y edficos, combinacin variedad-patrn, precocidad, etc.
3. Propagacin de las plantas
La multiplicacin de las variedades de ctricos se hace por medio de la injertacin. Este procedimiento permite prevenir y controlar determinadas
enfermedades (debido a la tolerancia del patrn), asegurar la transmisin
de caracteres agronmicos y genticos, y acelerar el inicio de la etapa productiva al eliminar la fase juvenil de la planta.
Lo recomendable para la produccin de plantas es encargarlas en un vivero de las ms altas calidades tcnicas. Los viveros obtienen semillas de
patrones de plantas madre de la especie o hbrido seleccionado. Las semillas se siembran en el semillero; despus de germinadas se seleccionan por
el tipo de planta, conformacin de la raz y estado sanitario; las plntulas
seleccionadas se ponen en las bolsas de vivero. En esta etapa se fertilizan, deschuponan y se seleccionan para realizar la injertacin (cuando
las plantas a los 30 cm tienen el grosor de un lpiz). Las yemas a injertar deben tomarse de ramas de segundo crecimiento de rboles madre,
preferiblemente del programa de certificacin; estos deben ser precoces,
productivos y de sobresaliente calidad de la fruta. El tamao del patrn
para injertar puede obtenerse 6-8 meses despus de ser sembrado en el
germinador; el tipo de injerto utilizado en la citricultura es el de T
invertida. Una vez se ha injertado la yema (25-30 cm sobre el nivel del
suelo), la herida debe ser sujeta con cinta impermeable para evitar que
se humedezca. El proceso de prendimiento puede tardar entre 20 y 30
das, despus de los cuales se quita la cinta y se procede a las labores de
deschuponado y de cuidado del injerto. El uso de cintas biodegradables
es una alternativa til. Se debe evitar en el trasplante hacerlo con plantas
de mucho tiempo en vivero y se debe realizar corte de las races basales
que se hayan deformado en el vivero.
4. Densidades y sistema de plantacin. La citricultura moderna tiene como objetivo maximizar el potencial productivo del cultivo por superficie en un
perodo mnimo de tiempo. El diseo de plantacin es un elemento importante para llevar al cumplimiento de dicho objetivo.
La densidad y diseo de plantacin estn en funcin de la especie y variedad (su tamao potencial, vigor de la planta, caractersticas climticas, y
/ 70 /

Generalidades de los ctricos y recomendaciones agronmicas para su cultivo en Colombia

del periodo productivo), de la interaccin variedad-patrn, de la topografa del terreno, las labores de mecanizacin y aun del tipo de proyecto a
establecer.
En Colombia, las distancias de plantacin han sido seleccionadas de forma
emprica, y en algunas localidades se sigue usando el arreglo cuadrado o
tresbolillo, que no favorece la mecanizacin y por tanto se aumentan los
costos de produccin. Los arreglos ms apropiados son los rectangulares,
los que se modifican de acuerdo con la especie, la variedad y el patrn. En
el piedemonte del Meta se ha plantado mandarina Arrayana a 8 x 5 m (250
plantas ha-1) y 8 x 6 m (208 plantas ha-1), esta distancia tambin es utilizada en cultivos de naranja y lima Tahit; mientras que tangelo Minneola ha
sido establecido a distancias de 9 x 7 m (148 plantas ha-1), todos injertados
con mandarina Cleopatra; en otras regiones del pas las distancias varan
por la topografa, patrones, fertilidad del suelo y tradicin. En la actualidad se tienen experimentos con patrones y con distancias de plantacin
en el piedemonte llanero lo que permitir saber hasta qu punto se puede
aumentar las densidades para cada cultivo en esta regin y de esta forma
aumentar las producciones por hectrea.
En las zonas de ladera se utilizan plantaciones en curvas a nivel; se aconseja sembrar, adems, bajo el sistema de tresbolillocomo proteccin para
el suelo32.
En el diseo de la plantacin deben considerarse el trazado de las vas de
acceso y de regreso de la maquinaria, los canales de riego y drenaje; adems
de tener en cuenta los tamaos de los bloques, calculando la facilidad y
costos del movimiento de la fruta y de los insumos.
5. Preparacin del suelo. La preparacin del terreno depende de las caractersticas fsicas y qumicas del terreno. Si el huerto est ubicado en un lote
plano, se puede usar el diseo de preferencia, en cuadrado o rectngulo,
facilitando las labores de mecanizacin; sin embargo, si el terreno es inclinado el trazo debe hacerse en curvas a nivel. La preparacin fsica puede
incluir desde desbroce y cincelada profunda, hasta arada o rastrillada, dependiendo de las caractersticas del terreno. Estas operaciones pueden ser
complementadas con el control de malezas con herbicidas sistmicos.
Durante la preparacin se aplicarn los correctivos y fertilizantes que el anlisis
de suelos (realizado previamente) haya sealado como necesarios. En el caso de
los suelos cidos, los correctivos deben aplicarse con regularidad en el cultivo, teniendo en cuenta la alta extraccin que realiza la planta ctrica en especial de Ca.
/ 71 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez, Diana M. Mateus Cagua

6. Trasplante: Debe realizarse con el inicio de las lluvias, aunque la disponibilidad de riego permitir realizar esta labor en cualquier poca del ao. Una
vez ubicadas las plantas en los sitios de plantacin, se retira la bolsa y se
ubica la planta en el centro del hoyo (de 40x40x40 cm, estas dimensiones
pueden variar en relacin con las caractersticas del suelo), procurando
que el cuello quede unos 5-10 cm por encima de la superficie. En esta fase
se utilizan abonos compuestos de N, P, K, con relaciones 3:1:3 y con elementos menores que contengan B, Zn, y Cu. Adicionalmente, los ctricos
responden favorablemente a la aplicacin de materia orgnica.

Manejo del cultivo


Fertilizacin
El objeto de la fertilizacin es suplir los nutrientes que faltan en el suelo,
mejorar la produccin por rbol, y restituir los elementos minerales extrados
por el cultivo. Para lograrlo se debe tener en cuenta: la produccin de fruta
(calidad, cantidad), edad de la plantacin, nmero de rboles y manejo general de la plantacin, con el fin de determinar dosis y fuentes a aplicar. Adems
de la disminucin de los rendimientos, las deficiencias nutricionales ocasionan defectos de calidad (externa e interna) de la fruta, con las consiguientes
dificultades en la comercializacin de los frutos.

Para estimar la disponibilidad de nutrientes del cultivo se usan los anlisis


de suelo; uno, antes del establecimiento para calcular la cantidad de enmiendas y correctivos, y luego, en el transcurso del cultivo, se hace anlisis de suelos cada 2-3 aos, y foliares, cada ao (preferiblemente despus de floracin).
Lo anterior debe ser complementado con diagnstico visual y los registros de
producciones y fertilizacin de los aos previos.
Dependiendo de la cantidad de nutrientes minerales requeridos para el
crecimiento de las plantas, cuyos valores totales varan desde gramos a miligramos por Kg de materia seca, son clasificados como: 1. macronutrientes: nitrgeno (N), fsforo (P), potasio (K), calcio (Ca), magnesio (Mg) y azufre (S),
y 2. Micronutrientes: hierro (Fe), cobre (Cu), manganeso (Mn), zinc (Zn),
boro (B), cloro (Cl), molibdeno (Mo) y nquel (Ni).
Las variedades y patrones de ctricos tienen diferentes necesidades y capacidades
para tomar los nutrientes del suelo. Los rboles sobre patrones que no estn muy
bien adaptados al suelo donde son plantados son frecuentemente ms afectados por
deficiencias nutricionales que los rboles injertados sobre patrones bien adaptados33.
/ 72 /

Generalidades de los ctricos y recomendaciones agronmicas para su cultivo en Colombia

A continuacin, algunas caractersticas generales de los elementos necesarios para el crecimiento y desarrollo de las plantas ctricas y los principales
sntomas ante deficiencia18, 34, 35.
Nitrgeno: tiene una gran influencia sobre el crecimiento, floracin y produccin en ctricos. Tiene influencia sobre el crecimiento vegetativo y la floracin, es absorbido durante todo el ao, aunque su demanda es mayor en la
poca de fructificacin. Sntomas de deficiencia: hojas color amarillo plido o
verde amarillento. Disminucin en produccin y en el tamao de los frutos,
cscara ms delgada y reduccin de la acidez y contenido del jugo.
Fsforo: Aunque la cantidad de fsforo absorbido por las plantas ctricas
es pequea, comparada con otros macro elementos, este elemento desempea un papel importante en la fisiologa de la planta. Su participacin en los
compuestos orgnicos permite un correcto funcionamiento de los procesos
anablicos y catablicos; adems de participar en el proceso de transformacin de la energa. En los ctricos se encuentra un 57% en el tronco y ramas,
un 9% en hojas y brotes, y el resto en los frutos. El problema de mayor disponibilidad de fsforo se da en suelos arcillosos. Debera estar presente en
cantidades adecuadas inmediatamente antes de la floracin; en las pocas de
invierno su absorcin se reduce. Sntomas de deficiencia: hojas en estado juvenil de menor tamao, cuando estas crecen se presentan necrosis en los bordes
y extremidades; presentan un tono opaco. La floracin es reducida, los frutos
se ablandan, el eje central es hueco y los segmentos del fruto se separan; los
frutos presentan bajo contenido de slidos solubles.
Potasio: no es un elemento constitutivo de algn componente esencial de
la planta; se considera que su papel es ms bien de carcter regulador. Mantiene la turgencia fisiolgica de la planta y el efecto balanceado entre la respiracin, la transpiracin y el anabolismo. Es uno de los elementos extrados en
mayor proporcin por cosecha. La demanda de potasio se registra: al trmino
de la floracin, a la cada de los frutos y a la maduracin de los mismos. Su
mayor exigencia se da en la etapa de crecimiento de los frutos. El exceso de
potasio induce deficiencia de magnesio, mientras que el exceso de calcio dificulta la absorcin del potasio. Sntomas de deficiencia: hojas pequeas que se
enrollan sobre s mismas, puede presentarse defoliacin y en algunas ocasiones
presencia de goma. Frutos pequeos con cscara delgada.
Calcio: es uno de los elementos con mayor presencia en las partes vegetativas de las plantas ctricas. Su absorcin puede ser reducida en presencia de
grandes concentraciones de potasio. Tambin es de importancia por su accin
/ 73 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez, Diana M. Mateus Cagua

sobre el suelo. Sntomas de deficiencia: las hojas ms viejas presentan clorosis a


lo largo de las nervaduras mayores, hay defoliacin. Los frutos son pequeos
con deformacin. Las ramas presentan muerte regresiva y el crecimiento de
los rboles se reduce. Deficiente desarrollo del sistema radicular.
Magnesio: es componente importante de la clorofila. La absorcin del
magnesio es inhibida por el potasio en mayor escala que el calcio. Es de suma
importancia en los procesos vitales, por lo cual se encuentra ms en hojas y
semillas que en tallos y races. Sntomas de deficiencia: amarillamiento entre
las nervaduras de las hojas ms viejas, la parte basal permanece de color verde
hasta un estado avanzado, lo que lleva a la formacin de una V invertida y
aspecto bronceado. Los frutos presentan mayor acidez.
Azufre: se presenta como componente de algunos aminocidos. Sntomas
de deficiencia: es difcil de observar en campo. Sin embargo las hojas ms jvenes presentan clorosis uniforme.
Zinc: es un elemento esencial, su deficiencia afecta la presencia de clorofila. Las deficiencias de magnesio pueden inducir deficiencia de zinc, as como
el cobre tambin reduce la absorcin del zinc. Sntomas de deficiencia: clorosis acentuada del limbo en fajas entre las nervaduras, en grandes deficiencias
toman aspecto de cebras. Las hojas son ms pequeas igual que el tamao
de las brotaciones nuevas. Los entrenudos se acortan, hay disminucin en la
produccin y los frutos son ms pequeos, con poco jugo.
Boro: es un elemento de difcil translocacin dentro de la planta; de gran
importancia, causa ms de 20 trastornos fisiolgicos cuando est en dficit. El
tejido meristemtico cesa en su crecimiento y en muchos casos la yema apical
llega a morir en casos de carencia del elemento. Es importante en la divisin
celular y en la polinizacin. Sus efectos estn relacionados con el crecimiento de los brotes y el deficiente cuajado de los frutos. Sntomas de deficiencia:
detiene el crecimiento, las hojas presentan ondulaciones en el limbo con nervaduras salientes. Frutos con deformaciones de tamao menor y cscara muy
gruesa. Pueden aparecer bolsas con contenido de azcar en el eje central de
los frutos.
Manganeso: es un elemento imprescindible en la formacin de clorofila
(aunque no forma parte de ella), reduccin de nitratos y en la respiracin.
Es catalizador de otros procesos metablicos; ayuda en la actividad respiratoria de la planta. Sntomas de deficiencia: clorosis entre las nervaduras de las
hojas ms jvenes aunque menos acentuadas que la del zinc. Si la deficiencia
/ 74 /

Generalidades de los ctricos y recomendaciones agronmicas para su cultivo en Colombia

aumenta, las hojas adquieren una coloracin opaca (mate) presentando una
vejez temprana.
Cobre: Sntomas de deficiencia: hojas verdes oscuras de gran tamao. Cuando la deficiencia es muy alta se presentan hojas muy pequeas que se caen
fcilmente. Lo frutos tienden a reventarse.
Hierro: es un catalizador en la planta, por lo cual es clave en diferentes
reacciones como la respiracin, la fotosntesis y la reduccin de nitratos y
sulfatos. La deficiencia de este elemento puede ser inducida por el exceso de
calcio o por la alta humedad del suelo. Sntomas de deficiencia: clorosis especialmente en las hojas jvenes, las nervaduras conservan el color verde; debido
a esto las hojas tienen un mal aspecto o red de color verde.
Molibdeno: Sntomas de deficiencia: manchas amarillas de forma circular
en las nervaduras de las hojas. Normalmente las hojas presentan bajos contenidos de calcio y magnesio, pero alto contenido de potasio.
Dosis y pocas de fertilizacin edfica
Las recomendaciones de fertilizacin deben ser especficas para cada plantacin o huerto (de acuerdo con las condiciones edafoclimticas) con base en
los anlisis de suelos y foliares. Respecto a este tema Reitz et al.36 afirmaron:
Los ctricos pueden desarrollar bajo una amplia gama de niveles de nutrimentos, y es imposible definir un solo programa de fertilizacin que sea considerado como mejor que los otros y para todas las condiciones. Una amplia
variedad de programas de fertilizacin esta en uso y muchos huertos bajo
ellos estn produciendo altos rendimientos de buena calidad de fruta. Todo
problema de fertilizacin reconoce y estima la existencia de diferencias en las
condiciones en que se desarrolla una plantacin de ctricos.

La aplicacin de la nutricin mineral puede hacerse manualmente o con


maquinaria. En Colombia la fertilizacin suele hacerse manualmente, mientras que la aplicacin de enmiendas se hace de forma mecnica. El primer ao
la aplicacin debe hacerse a 20-30 cm del tronco para evitar intoxicaciones
en planta, posteriormente la distancia de aplicacin va aumentado en radios
de 1- 2 m. Se recomienda realizar 3 a 4 aplicaciones anuales distribuidas en
el ao segn los ciclos de produccin de cada regin y variedad; la dosis debe
ir en aumento segn la edad partiendo de una dosis mnima en plantas de un
ao. El exceso de abono puede causar intoxicacin en las plantas; es necesario
tener particular cuidado con el B en plantas jvenes; por tal motivo debe evitarse la aplicacin de fuentes simples de este elemento.
/ 75 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez, Diana M. Mateus Cagua

En los suelos cidos, antes del establecimiento de los cultivos, es necesario


corregir la acidez y aumentar el contenido de bases totales en el suelo como
mnimo hasta el 70%. Adems de la fertilizacin qumica, tambin pueden
aplicarse fuentes orgnicas. Para subsanar problemas de dficit de algunos elementos de forma rpida, puede utilizarse la aplicacin de fertilizantes foliares;
este tipo de fertilizacin es de uso complementario a la edfica.
La nutricin apropiada de los cultivos de ctricos es influenciada por todas
las prcticas culturales incluyendo el control de plagas y enfermedades, la adecuacin del suelo y las condiciones ambientales del lugar. Por tanto, un buen
programa de fertilizacin debe ir acompaado de buenas prcticas agrcolas.
Las pocas de mayor exigencia en nutrientes minerales de la planta ocurren
durante la floracin ya que en esa poca existe demanda tambin por hojas y
brotes nuevos. Una nutricin deficiente en esta poca puede conducir a una
disminucin significativa de la productividad.

Podas
Esta prctica es utilizada para promover el equilibrio fisiolgico en la planta, de tal forma que no solo haya crecimiento controlado de la parte vegetativa, sino tambin una produccin uniforme y abundante. Con esta operacin
se altera el crecimiento natural de la misma al interrumpir la dominancia
apical y promover la produccin de brotes laterales para mejorar la aireacin y
entrada de luz, entre otros, ya que generalmente los ctricos tienen una marcada tendencia a producir follaje denso en la parte externa de la copa y a crecer
verticalmente en longitud, sobre todo en condiciones de trpico (hmedo).
La planificacin de las podas debe ser acorde con las condiciones ambientales
de cada regin productora, teniendo en cuenta que perodos de estrs hdrico,
seguidos de periodos de lluvias, promueven las brotaciones vegetativas; en
Colombia debe tenerse en cuenta entonces la distribucin de lluvias (monomodales o bimodales) y el vigor de cada especie.
Existen bsicamente dos tipos de podas manejadas en la citricultura colombiana:
Poda de formacin. Es utilizada para darle la arquitectura deseada a la
planta, de tal forma que pueda resistir ms adelante las cosechas al tener una
buena estructura y estas se distribuyan de forma correcta. Esta actividad inicia en vivero y contina durante algn tiempo despus del trasplante, ms
o menos hasta el tercer ao. Consiste en propiciar una doble Y con 3 a 5
/ 76 /

Generalidades de los ctricos y recomendaciones agronmicas para su cultivo en Colombia

ramas principales a una altura de 60-80 cm del suelo (se prefieren la mayor
altura en plantas vigorosas de copa ancha y con altas producciones, ya que la
fruta puede pegar con el suelo perdiendo calidad); a partir de estas ramas se
desarrollarn las secundarias, asegurando una correcta distribucin del follaje
alrededor del rbol. Se debe evitar que las ramas seleccionadas queden enfrentadas para evitar problemas de rotura cuando la planta llegue a produccin.
Durante esta etapa todo chupn basal o rama que se desarrolle en el patrn
debe ser eliminado.
Poda sanitaria. Esta poda moderada es usada para controlar el desarrollo
del rbol y corregir desbalances vegetativos que se presentan por la dominancia apical o excesivo vigor de algunas ramas; tambin para eliminar ramas
viejas, enfermas o improductivas, y plantas parsitas.
Luego de realizar cualquier tipo de poda, es recomendable cubrir las heridas
con algn fungicida o cicatrizante. De igual forma las herramientas utilizadas
deben ser siempre desinfectadas con hipoclorito o vanodine en concentraciones entre 1 y 2% antes y despus de cualquier poda como cuidado preventivo.

Manejo de arvenses
Los controles mecnico y qumico son prcticas empleadas en Colombia
para el manejo de arvenses en el cultivo de ctricos. Se afirma que estas varan
de acuerdo con la zona en la que se encuentre el huerto (pisos trmicos, clima)
y el historial desde antes del establecimiento (cultivos previos, sobre todo para
plantaciones jvenes); as que el plan de manejo necesita ser especfico para
cada situacin.
El control de arvenses tiene como objetivo principal eliminar la competencia que pueda existir entre las malezas y los ctricos por la disponibilidad de
nutrientes y as promover un desarrollo ptimo y una buena productividad
por rbol. Las plantas muy jvenes son las ms sensibles a los daos ocasionados por la competencia de malezas. Sin embargo, aun en huertos con plantas
adultas, si la presin es muy alta, el dao ocasionado puede tener importancia
econmica.
Uno de los mtodos ms utilizados por los citricultores colombianos es
el uso de productos qumicos tanto para el control de arvenses en las calles
como en el rea de plateo del cultivo; seguido a este se encuentra el control
mecnico a mano, con machete, guadaa o tractor. Para el manejo de arvenses
en las calles del cultivo es recomendable la aplicacin de herbicidas sistmicos
/ 77 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez, Diana M. Mateus Cagua

en presencia de pastos o material vegetal de difcil erradicacin (sobre todo


antes del establecimiento del cultivo). Es aconsejable en huertos adultos el uso
de tcnicas que permitan hacer una seleccin de las especies deseables como
cobertura natural; para esto pueden utilizarse el azadn qumico y la guadaa.
Sumado a esto, es posible establecer coberturas vegetales entre calles que
proporcionan condiciones favorables al cultivo. El man forrajero (Arachis
pintoi), es una de las principales opciones utilizadas en los cultivos; esta leguminosa, aparte de fijar N en el suelo, ayuda a mejorar las condiciones fsicas
(facilitando la penetracin de races y mejorando la permeabilidad del suelo),
y proporciona un rpido y permanente cubrimiento de la superficie del suelo, obteniendo un buen control de las malezas. Al usar coberturas vegetales
se debe buscar que estas no compitan con el cultivo de ctricos, evitando su
desarrollo en el rea de plateo de los rboles, pues las races absorbentes de los
ctricos son superficiales (encontrndose en su mayora en los primeros 30 cm
de profundidad). En el rea de plateo se puede hacer aplicacin de herbicidas
y uso de coberturas muertas, como residuos de cosecha (tambin se puede
usar la cascarilla de arroz, siempre y cuando no lleven malezas del cultivo),
que impidan cualquier tipo de competencia.
Las labores mecnicas con el uso de guadaas manuales para el control
de malezas en el rea de plateo deben realizarse con precaucin para evitar
las heridas en tronco o races, ya que adems del dao fsico puede facilitar
la infeccin de enfermedades graves como es el caso de Phytophthora; adicionalmente, es importante que los operarios que realizan estas labores utilizan
todos los elementos de proteccin para evitar accidentes en campo.

Manejo de plagas
El manejo integrado de plagas son los mtodos de control basados en las
dinmicas poblacionales de las especies, los cuales tienen como fin mantener las poblaciones de insectos y caros dainos por debajo de los niveles de
dao econmico, utilizando elementos de control que minimicen el impacto
ambiental y sean de bajo costo. En el caso de las plagas clave, se deben hacer
monitoreos permanentes y en el caso de ser necesario aplicar control qumico,
se debe seleccionar el producto especfico para la plaga y, de ser posible, aplicarlo de forma localizada.
En Colombia se presenta un gran nmero de plagas, debido a su condicin
tropical. Sin embargo, hay algunas de ellas que se consideran de importancia
/ 78 /

Generalidades de los ctricos y recomendaciones agronmicas para su cultivo en Colombia

econmica, otras que pueden llegar a ser potenciales y otras que, aunque pueden afectar, se consideran secundarias por no tener importancia econmica.
A continuacin se mencionan algunas de las principales plagas de los ctricos en Colombia y recomendaciones para su manejo37-40:
Acaro tostador (Phyllocoptruta oleivora, Eriophyidae) y otros caros

Existen varias especies de caros que afectan las plantas de ctricos. Tienen
forma alargada, color amarillo claro y su tamao oscila entre 0.13 y 0.16 mm.
Son considerados como una plaga primaria debido a su amplia distribucin
en las diferentes regiones citrcolas del pas (en especial el tostador) y el dao
que causa sobre la fruta (afectando la calidad externa). Su mayor incidencia es
en pocas de verano, altas temperatura y baja humedad relativa.
Se alimenta de la epidermis de las hojas causando deformaciones en las
mismas, costras en el envs, acartonamiento y cada de follaje. El fruto tierno
afectado por los caros adquiere una coloracin mate y una superficie rugosa,
sntomas que se hacen mucho ms evidentes a medida que este se desarrolla.
El caro Brevipalpus phoenicis es trasmisor del virus de la leprosis de los ctricos en Colombia, convirtindose tambin en una especie de importancia
econmica.
Tiene como enemigos naturales depredadores de las familias Coccinellidae
y Staphylinidae, lo cual debe evaluarse antes de hacer un control qumico. Monitoreo continuo, y en caso de poblaciones muy altas, aplicacin localizada de
acaricidas o productos azufrados.
Termitas (Heterotermes sp.)

Ya que prefieren las zonas secas como hbitat, esta plaga tiene mayor incidencia en la regin Caribe de Colombia. El dao lo realizan debajo del cuello
de la raz y alrededor del tronco, en las races secundarias y consume la corteza
de los rboles. Pueden causar desde debilitamiento hasta muerte de la planta.
Adems, las heridas provocadas pueden favorecer la entrada de patgenos del
suelo como Phytophthora sp.
El manejo preventivo consiste en eliminar todo material de madera seca.
Mientras que el manejo curativo puede consistir en aplicar pasta bordelesa
desde el cuello de la raz a una altura de 1m aproximadamente. Tambin
pueden hacerse aplicaciones en la zona de plateo de insecticidas granulados
(organofosforados).
/ 79 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez, Diana M. Mateus Cagua

Minador de los ctricos (Phyllocnistis citrella Stainton)

Es un microlepidptero que afecta principalmente las hojas jvenes de los


rboles. Se encuentra disperso en las regiones productoras de ctricos en Colombia. Esta plaga es limitante especialmente en plantas jvenes y en viveros,
al dificultar la formacin de los rboles por el dao ocasionado en los brotes
nuevos. Las aspersiones de Bacillus thuringiensis y el uso de trampas adhesivas
de color disminuyen el dao en viveros. Los parasitoides ms frecuentes son
Cirrospilus spp., Closterocerus sp., y Galeopsomyia fausta.
En plantas adultas, la presencia de altas poblaciones afecta ramas con
brotes tiernos e inclusive frutos. El dao ocasionado en las hojas puede
llegar a causar una disminucin del rendimiento y de la cosecha, pues estos
son afectados directamente en la superficie foliar til. En plantas jvenes recin establecidas puede ocasionar daos graves en especial en lotes en donde
se inicia el cultivo de ctricos, en parte, porque los enemigos naturales no
se han establecido. De ser severo el dao es necesario realizar aplicaciones
qumicas.
Los huertos con buen manejo agronmico soportan los daos que generalmente se presentan, ya que la plaga se encuentra controlada por una
amplia variedad de enemigos naturales. El umbral de dao est estimado
en 0.7 larvas por hoja joven o cuando el rea afectada en hojas nuevas supera el 25%. La aplicacin de kerosn y jabn blanco ha funcionado para
disminuir la incidencia de la plaga. Tambin pueden emplearse insecticidas
con ingredientes activos: Abamectina (0.02%), Lufenuron (0.15%), Benfuracarb (0.25%).
Picudo de los ctricos

Compsus sp. (Coleoptera: Curculionidae). Es considerada como una de las


principales plagas en los ctricos. Se registr por primera vez en Colombia en
el ao 1939, aumentado su poblacin y afeccin con el tiempo. Las larvas
se alimentan de las raicillas, pelos absorbentes, raz pivotante y races secundarias; mientras que los adultos se alimentan de rebrotes, ptalos y frutos
recin formados, provocando daos de importancia econmica significativos
(de hasta 50%).En el piedemonte del Meta se han tenido buenos resultados
de manejo de las poblaciones del picudo de los ctricos con la aplicacin del
entomopatgeno Beauveria bassiana con cepas colectadas en la regin. Los
mejores controles se han obtenido haciendo la aspersin al inicio de la poca
lluviosa, antes de la aparicin de las poblaciones del adulto.
/ 80 /

Generalidades de los ctricos y recomendaciones agronmicas para su cultivo en Colombia

fidos o pulgones (pulgn negro: Toxoptera citricidus)


Es una de las plagas ms peligrosas en ctricos en el mundo no solo por causar
daos a la planta sino tambin por ser transmisor del virus de la tristeza de los ctricos. Sus poblaciones son reguladas por factores ambientales: alta pluviosidad y gran
variedad de enemigos naturales parsitos y depredadores presentes en los huertos.

Afectan hojas tiernas, partes terminales o rebrotes, donde se agrupan y


alimentan (en el envs generalmente), causando enrollamiento y deformaciones al extraer la savia de las plantas. En grandes poblaciones contribuyen a
la formacin de fumagina sobre las hojas y ramas, promoviendo la presencia
de hormigas, las cuales se asocian formando colonias. Estos fidos afectan
tambin los botones florales y los frutos en primera fase ocasionando su cada.
En condiciones naturales, presentan un buen control por enemigos naturales, dentro de los que estn: Crysopa sp., varias especies de cucarroncitos
Coccinellidae, moscas de la familia Syrphidae, trips, chinches y caros depredadores. Entre los parasitoides se destacan avispitas Lysiphlebus sp., y Aphelius
sp. Hongos entomopatogenos como Verticillium lecanii tambin pueden afectar los fidos hasta causarles la muerte. Cuando la infestacin es muy alta se
pueden emplear insecticidas sistmicos en forma localizada.
Escamas o cochinillas (Lepidosaphes beckii) Cochinilla harinosa
(Planococcus citri.) Orthezia praelonga.

De importancia secundaria a potencial que se presentan en cualquier poca,


aunque su incidencia puede ser mayor en veranos y en zonas secas; son insectos
chupadores que forman colonias en las hojas, ramas, troncos y frutos. En plantas jvenes pueden causar atraso en el crecimiento e inclusive muerte de la planta. La escama roja (plaga mundial en los ctricos) muestra preferencia por los
frutos ms que por las hojas, causando depreciacin comercial de los mismos.
El control biolgico con avispitas parasitoides (como Aphytis sp.) es recomendado; en cuanto a la cochinilla harinosa, pequeas avispas parasitoides
de la familia Encyrtidae y predadores como los coccinlidos Cyclonea sp y
Cryptolaemus sp., sirven para su regulacin natural. El cucarroncito Hyperaspis sp., y la chrisopa Chrysoperla sp. actan como insectos depredadores de
Orthezia. En casos de altas poblaciones puede emplearse el control qumico
con productos anticoccidos como metidation y piriproxifen en premezcla con
un aceite mineral. Existen evidencias prcticas en el piedemonte del Meta
sobre el control de poblaciones de Orthezia con entomopatgenos dentro de
los que estn los gneros: Verticilliumy Metarrizium.
/ 81 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez, Diana M. Mateus Cagua

Manejo de enfermedades
Son numerosas las enfermedades que afectan a las plantas ctricas; estas
pueden afectar la cantidad y calidad de la produccin en diferentes formas y
niveles. El objetivo del manejo integrado es vigilar y regular los procesos de
infeccin de tal forma que no tengan un impacto econmico negativo sobre
la plantacin, ya que la condicin tropical en la que se encuentra ubicada Colombia hace imposible mantener en cero la presencia de las mismas.
Con todo, es importante conocer aquellas que pueden ser ms peligrosas
para el futuro de la plantacin y las recomendaciones generales para prevenirlas o combatirlas. A continuacin se presenta la sintomatologa en campo de
algunas de las enfermedades ms importantes en ctricos18, 41-43.
Tristeza de los ctricos o CTV: Esta enfermedad afecta los vasos conductores de la planta, impidiendo el paso de nutrientes hacia la raz provocando el
debilitamiento de la planta. Algunos sntomas ocasionados por la enfermedad
son aclaramientos de los nervios en hojas jvenes y decaimiento; frutos, ramas
y hojas pequeas y abarquilladas; acanaladuras en tallo y ramas, estrs del rbol, defoliacin prematura y finalmente muerte total de la planta. Sus vectores
son Toxoptera citricidus y Toxoptera aurantii. El naranjo agrio es el patrn ms
susceptible a la tristeza.
El manejo de esta enfermedad debe ser preventivo por medio del uso de
patrones tolerantes y la adquisicin de material de propagacin, con calidad
sanitaria. Actualmente se desarrolla la tcnica de micro-injertacin de pices
caulinares para la obtencin de yemas limpias de CTV. Sin embargo, esta tcnica debe ir acompaada de mtodos de diagnstico y manejo agronmico,
adaptadas a las condiciones locales en que se encuentre el cultivo; en etapa de
vivero, por ejemplo, es muy importante el control de las poblaciones de fidos
con mallas anti pulgn.
Leprosis: enfermedad causada por un virus tipo baciliforme transmitido
por el caro Brevipalpus phoenicis que afecta principalmente naranjos y mandarinos. Su sintomatologa son: lesiones clorticas en hojas, frutos y ramas
con reas necrticas, crculos concntricos con goma; cada del fruto y a veces
muerte del rbol. Las lesiones causadas en los frutos son externas las cuales
deprecian su calidad. Entre los enemigos naturales de Brevipalpus son importantes los caros predadores de la familia Phytoseiidae. Los manejos pueden
ser preventivos con aplicaciones calendario de acaricidas o por monitoreos y
tomando decisiones de acuerdo con los niveles de poblaciones. Podas sanitarias, y eliminacin de hojas defoliadas ayudan al control.
/ 82 /

Generalidades de los ctricos y recomendaciones agronmicas para su cultivo en Colombia

Otras enfermedades causadas por virus que deben ser consideradas son:
Xiloporosis y Psorosis. La estrategia a utilizar es el uso de yemas libres provenientes de programas de certificacin y patrones tolerantes.
Exocortis: La enfermedad es producida por el viroide de la exocortis de los
ctricos (CEVd). El sntoma caracterstico es la descamacin de la corteza y
produccin de grietas sobre el patrn; algunas veces se manifiesta como fisuras,
con presencia de una sustancia gomosa. Como efectos secundarios pueden observarse: desarrollo de la copa en diferentes grados de enanismo, clorosis y decaimiento general de la planta. Como control se recomienda el uso de material
sano proveniente de viveros registrados y la desinfeccin de las herramientas de
corte, a travs de las cuales la enfermedad puede ser transmitida.
Gomosis (Phytophthora parastica y P. citrophtora): La primera manifestacin visible de la enfermedad es la presencia de lesiones oscuras de forma
irregular en el tronco. Luego se inicia la formacin de grietas a travs de las
cuales sale un exudado gomoso que se observa con ms facilidad en la poca
seca. Las lesiones pueden extenderse en forma vertical o lateral llegando a
cubrir toda la circunferencia del tronco; en este estado es cuando se produce
la muerte del rbol, pues el transporte de fotoasimilados de la copa hacia las
races es interrumpido.
Con esta enfermedad puede realizarse un control preventivo o curativo.
Como medida preventiva se recomienda la eleccin de patrones tolerantes
(lima rangpur y limn rugoso son muy susceptibles) e injertar a unos 40 cm
del suelo. Se debe evitar encharcamientos y daos mecnicos en el tronco y
races. Es aconsejable hacer controles peridicos a estas partes de la planta; en
caso de encontrar lesiones se puede limpiar la herida, haciendo una incisin a
la corteza y eliminando todo residuo o mancha sobre el tronco. Se aplica pasta
bordelesa y una vez cicatrizada la herida, pintar con alquitrn. Este procedimiento permitir prolongar la vida del rbol. Otro medio curativo es la aplicacin de fungicidas sistmicos con ingredientes activos: captan o Fosetil-al.
Antracnosis (Collectotrichum gloesporioides): Esta enfermedad ataca hojas,
flores y frutos. Causa lesiones necrticas de color caf de consistencia seca y
quebradiza que inician generalmente en los bordes con un halo clortico. Los
acrvulos del hongo pueden observarse en el centro de las lesiones en forma
de puntos oscuros. En partes tiernas como las flores ocasionan su cada; en
los frutos ocasionan, al inicio de la enfermedad, lesiones oscuras irregulares
que cambian a forma corchosa de color caf oscuro; pueden afectar tambin
el pndulo provocando la cada de los mismos.
/ 83 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez, Diana M. Mateus Cagua

Como manejo preventivo se debe aplicar un ciudado ptimo a la plantacin, siguiendo las recomendaciones tcnicas de fertilizacin, manejo de
arvenses, etc.; las ramas secas y brotes muertos deben ser retirados. La aplicacin de fungicidas sistmicos y protectantes de forma preventiva antes de la
floracin tambin es recomendable.

Riego
Los requerimientos hdricos necesarios para el sostenimiento del cultivo de
ctricos en el trpico pueden ser determinados por medio de la metodologa
propuesta por FAO utilizando la frmula: ETc= ET0 x Kc; donde Kc es el
coeficiente especfico para el cultivo a trabajar. El valor sugerido por la FAO
para ctricos es: 0,75 para los meses de lluvia y 0,8 para los meses secos.
Esta informacin es de importancia a la hora de planificar el cultivo. Por
ejemplo, en condiciones de trpico bajo en el piedemonte del Meta el requerimiento hdrico anual es de 1046 mm ao-1.Este valor es suplido durante 9 meses por las precipitaciones. Sin embargo, durante tres meses este valor es inferior,
provocando un perodo de dficit hdrico que genera estrs e induccin floral
en la planta de ctricos; mientras que la brotacin y floracin inician con la rehidratacin de la planta posterior a dicho dficit ocasionada por la lluvia44. Una
vez se rompe el periodo de estrs, es ideal que las precipitaciones sean continuas
para evitar el aborto floral; ante la ausencia de precipitacin en la fase floracincuajado, se recomienda el uso de riego. Especies como la mandarina son mucho
ms sensibles a estos cambios por presentar una sola floracin principal durante
todo el ao, la que ser finalmente la produccin de importancia comercial.
Por otro lado, las plantaciones recin establecidas deben contar con sistemas temporales de riego en los primeros aos de establecimiento del cultivo.
Despus de los 3-4 aos las plantas son tolerantes al dficit o estrs hdrico
moderado, el cual es necesario en plantas adultas para inducir la floracin.
Las regiones citrcolas de Tolima-Huila y del Caribe seco presentan dficit
durante varios meses del ao, razn por la cual debera implementarse riego
de forma permanente en las explotaciones.
Referencias bibliogrficas
1. ORDUZ, J. Caractersticas de la citricultura en el departamento del Meta y
avances en el proceso de desarrollo tecnolgico. En: Actualizacin tecnolgica
/ 84 /

Generalidades de los ctricos y recomendaciones agronmicas para su cultivo en Colombia

en ajonjol, caucho, hortalizas y frutales para la Orinoquia colombiana. Villavicencio: Corpoica Plante. 1998. p. 25-32.
2. ________. Algunos elementos estratgicos para el desarrollo de la fruticultura
Colombiana. En: Revista Novedades Tcnicas. Corpoica. 2011. Vol. 12, No 16.
p. 10.
3. TANAKA, T. Fundamental discussion of Citrus classification. In: Studia Citrologica. 1977. Vol. 14. p. 1-6.
4. JACKSON, L. K. y DAVIES, F. S. Citrus growing in Florida. Florida: University Press of Florida, 1999. 313 p.
5. SWINGLE, W. T. The botany of citrus and its wild relative. In: Reuthers, W.;
Batchelor, L. (eds). The citrus industry. California: University of California
Press, 1967. p. 129 474.
6. DAVIES, F. S. y ALBRIGO, L. G. Citrus. Wallingford, U.K.: CAB International, 1994. 254 p.
7. BONO, R. Nuevas variedades de ctricos. En: I Congreso de citricultura de la
Plana. Nules, Espaa. 26-27 Marzo. 1993.
8. RAMREZ, E. Botnica, especies y cultivares. Ctricas. 2 ed. Venezuela.
Fundacin Servicio para el Agricultor, 1986. p. 15-22. Serie Petrleo y Agricultura.
9. SCORA, R. W. Biochemistry, taxonomy and evolution of modern cultivated
citrus. In: Proceedings of the International Society of Citriculture. 1988. Vol.
1, p. 277-289.
10. YELENOSKY, G. Environmental factors affecting citrus. In: J. Fruit Vari.
1985. Vol. 39. p. 51-57.
11. ROS-CASTAO, D. y CAMACHO, S. Ctricos. En: Frutales. Manual de
Asistencia Tcnica No. 4. Tomo 1. 2. Ed. Bogot: Instituto Colombiano Agropecuario, 1980. p. 23-124.
12. SNCHEZ, L. A.; JARAMILLO, C. y TORO, J. C. Fruticultura Colombiana.
Ctricos. Manual de Asistencia Tcnica No. 42. Cal, Colombia: Instituto Colombiano Agropecuario y Servicio Nacional de Aprendizaje, 1987. 97 p.
13. ROS, G.; et al. Zonificacin, caracterizacin y tipificacin de los sistemas de
produccin de naranja (Citrus sinensis Osbek) en la regin Andina. Rionegro
Antioquia: C.I. La Selva, 2006. 65 p.
14. PEZ, A.; et al. Caracterizacin de los sistemas de produccin de citricos y papaya en la region Caribe colombiana. Boletin de investigacin N 9. Valledupar
(Cesar): Corpoica, 2004. 140 p.
/ 85 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez, Diana M. Mateus Cagua

15. ORDUZ, J. y Avella, F. Comportamiento de 26 cultivares de naranja en condiciones del piedemonte del Meta, Colombia. En: Rev. Colomb. Cienc. Hort.
2008. Vol. 2, No. 2. p. 157-172.
16. CAICEDO, A.; et al. Practicas de establecimiento y manejo de plantaciones de
ctricos tecnificados. C.I. Tibaitat: Corpoica, 2006. 51 p.
17. CORRALES, G. Manual ilustrado para la produccin de ctricos en Colombia.
Bogot: MADR Asoctricos- FNFH, 2002. 167 p.
18. MORALES, J. y LPEZ, J. Aspectos bsicos para el cultivo de mandarina Citrus reticulata. Manual tcnico. Corpoica. 2007. 62 p.
19. MATEUS, D.; et al. Evaluacin econmica de la produccin de ctricos cultivados en el Piedemonte del Departamento del Meta durante 12 aos. En: Orinoquia. 2010. Vol. 14, No. 1. p. 16-26.
20. KOGSON, J.; HURTADO, A. y LEMA, A. Evaluacin de fungicidas protectantes y aplicaciones de fertilizantes foliares para el control de Alternaria sp en
tangelo Minneola. En: memorias VII seminario internacional de frutas tropicales. Agroindustria e innovacin. Corpoica, UPB y CDTF. 2010. 100 p.
21. QUIROGA, J.; et al. Comportamiento de la produccin de lima Tahit (Citrus latifolia Tanaka), injertada sobre el patrn de Mandarina Cleopatra (Citrus
reticulata Blanco) y la influencia del virus de la tristeza (CTV) en condiciones
del piedemonte del Meta, 1997-2008. En: Orinoqua. 2010. Vol. 14, No. 1. p.
5-15.
22. CASTLE, W. S. Citrus rootstocks. En: Rom, R.C. y Carlson, R.C. (eds.). Rootstocks for fruit crops. New York: John Wiley and Sons, 1987. p. 361-369.
23. WUTSCHER, H. K. y BISTLINE, F. W. Performance of Hamlin orange on
30 citrus rootstocks in Southern Florida. En: Journal of the American Society of
Horticultural Science. 1988. Vol. 113. p. 493 497.
24. LOUSSERT, R. Los agrios. Madrid, Espaa: Editorial Mundi-Prensa, 1992.
319 p.
25. JARAMILLO, C. Patrones para ctricos: Experiencias con patrones en Colombia. In: Fruticultura tropical. Becerra, O., L.A. (Ed). Bogot, FNC, 1984. p.
172-179.
26. ARANGO, L.; ORDUZ, J. y LEN, G. Patrones para ctricos en los llanos
orientales de Colombia. En: Avances de investigacin. Corpoica. 2009. 12 p.
27. LPEZ, J. Propagacin de los ctricos. Cenicaf. Avances tcnicos, 2008. 372 p.
28. LPEZ, J. y CARDONA, J. Evaluacin de portainjertos de ctricos en la zona
central cafetera de Colombia. Colombia: Cenicaf, 2007. 55 p.
/ 86 /

Generalidades de los ctricos y recomendaciones agronmicas para su cultivo en Colombia

29. ORDUZ, J.; et al. Comportamiento de la mandarina Arrayana en seis patrones


en suelos cidos del piedemonte llanero de Colombia. Agron. Colomb. 2006.
Vol. 24, No. 2, p. 266-273.
30. ROS, D. Catalogo de variedades. Cali Candelaria: Profrutales Ltda, 2005.
32 p.
31. ORDUZ, J. Ecofisiologa de los ctricos en el trpico: Revisin y perspectivas.
In: II Congreso Colombiano de Horticultura, Bogot. Memorias del evento.
Bogot: Produmedios, 2007. p.67 76. V. II.
32. ESCOBAR, W. Factores de produccin y comercializacin frutcola: ctricos.
2008.
33. ROMAN, C. A. Cultivos de Ctricos. Memorias Curso regional de frutas tropicales. Villavicencio. 1993.
34. BAQUERO, C. La fertilizacin y su importancia en el cultivo de los ctricos. En:
Tecnologa para el cultivo de ctricos en la regin Caribe de Colombia. Corpoica. 2008. p. 90-102.
35. MALAVOLTA, E. Nutricin y fertilizacin de los ctricos. En: Fertilizacin de
cultivos de Clima Medio, captulo 7. Monmeros. 1995. p 133-170.
36. REITZ, H.; et al. Recommended fertilizers and nutritional sprays for citrus.
Gainsville: University of Florida. Agric. Exp. Station, Bull. 1959. No 536. 54 p.
37. ARCILA, A. y LPEZ, E. Principales plagas de los ctricos en la regin Caribe
de Colombia: descripcin y manejo. En: Tecnologa para el cultivo de ctricos en
la regin Caribe de Colombia. 2008. Corpoica. p. 104-115.
38. LEN, G. Parasitoides del minador de los ctricos Phyllocnistis citrella (Lepidptera: Gracillariidae) en el piedemonte del Departamento del Meta. En:
Revista Colombiana de Entomologa. 1999. Vol. 25, No. 3-4.p. 143-146
39. LEN, G. Insectos de los ctricos. Gua ilustrada de plagas y benficos con
tcnicas para el manejo de los insectos dainos. Corpoica-ASOHOFRUCOL,
2001. 83 p.
40. NASCA, A. J.; et al. Animales perjudiciales y benficos a los ctricos en el Noroeste Argentino. Tucumn: Centro de Investigaciones sobre regulaciones de poblaciones de organismoe nocivos. AR, CIRPON. 1981. 351 p.
41. BARAONA, M. y SANCHO, E. Fruticultura especial: Ctricos. EUNED.
1991. 91 p.
42. RODRGUEZ, J. C.; et al. Citrus leprosis virus vectored by Brevipalpus phoenicis (Acari: Tenuipalpidae). En: Citrus in Brazil. Experimental and Applied Acarology. Kluwer Academic Publishers, 2003.161-179 p.
/ 87 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez, Diana M. Mateus Cagua

43. CAICEDO, A.; et al. Criterios bsicos para fortalecer el programa de certificacin de plntulas de ctricos libres de enfermedades virales en Colombia. En:
Colombia. Innovacin Y Cambio Tecnolgico - Corpoica. 2007. p. 24 - 44.
44. ORDUZ, J. y FISCHER, G. Balance hdrico e influencia del estrs hdrico en la
induccin y desarrollo floral de la mandarina Arrayana en el piedemonte llanero
de Colombia. En: Agron. colomb. 2007. Vol. 25, No. 2. p.255-263.

/ 88 /

Captulo 3 / Chapter 3

Fisiologa de la floracin y
fructificacin en los ctricos
Alexander Rebolledo Roa*

Resumen
En el presente captulo, se hace una sntesis de los avances en investigacin sobre fisiologa de la produccin
en ctricos bajo condiciones subtropicales, y algunos
casos de estudio bajo condiciones del trpico colombiano, con el fin de brindar informacin para perfilar
y dar continuidad al desarrollo de investigaciones que
permitan generar tecnologa local.
Palabras clave: Ctricos, produccin, fisiologa, niveles de floracin, abscisin, crecimiento y desarrollo del
fruto.

Abstract

nvestigador Ph. D.
Corpoica. C.. Palmira
Correspondencia:
[email protected]

In this chapter, a brief about the research advances


concerning the physiology in the production of citrus
under sub tropical conditions is made, and some study cases under the Colombian tropical conditions are
showed in order to provide information to refine and
continue the development of research works that ease
the generation of local technology.
Key words: Citrus, production, physiology, flowering
levels, abscission, growth and development of the fruit.
/ 89 /

Alexander Rebolledo Roa

ntroduccin
Una caracterstica clave de algunas especies frutales es que a pesar de producir
un alto nmero de flores, los rboles ajustan la cantidad de ellas que finalmente
cuajan y el nmero de frutos que llegan a cosecha. Este ajuste ha sido explicado
atravs de las interrelaciones que se presentan al interior de la planta, relacionadas
con el potencial gentico de la especie, los niveles de floracin, tipos de inflorescencias, disponibilidad de nutrientes y capacidad para ser transportados a los
frutos en crecimiento. El potencial gentico se ve estimulado por los factores ambientales propios de cada regin. De esta forma se presentan diferencias marcadas
entre el comportamiento productivo bajo condiciones subtropicales y tropicales.
En ctricos, por ejemplo, se pueden llegar a producir hasta 100.000 flores en algunas variedades, con solo un cuajado del 2%, alcanzado en ocasiones hasta 0.1%1.
Los ctricos son capaces de crecer y de fructificar en condiciones ambientales muy diversas, desde climas subtropicales relativamente fros hasta zonas
tropicales clidas. No parece existir una caracterstica climtica comn que
pueda actuar como factor inductivo indispensable para la floracin, y por esta
razn los ctricos se han considerado como una especie autoinductiva2-4. Sin
embargo, la floracin y, en consecuencia, la produccin en los ctricos estn
marcadamente estimuladas por factores ambientales, entre los que se encuentran un rgimen de temperaturas moderadamente bajas bajo condiciones subtropicales, y el estrs hdrico bajo condiciones tropicales5.
Como un aporte al conocimiento de la fisiologa de los ctricos en Colombia,
Riao; et al.6 llevaron a cabo un estudio en Naranja Valencia sobre dos patrones
(Sunky x English (SxE) y Citrumelo 4475 (CPB)), determinando las tasas de
fotosntesis y respiracin, y caracterizando adems la estructura de la fronda del
rbol y la construccin de las curvas de crecimiento de la planta y del fruto, en
funcin del tiempo cronolgico y el tiempo trmico. Estos investigadores tambin determinaron la emisin floral y el cuajamiento de los frutos a travs del
tiempo, relacionando su comportamiento con la oferta edafo-climtica de cada
uno de los sitios de estudio, con el fin de comprobar si existe un patrn estacional; no obstante, los resultados no permitieron establecer dichas relaciones.

La floracin en los ctricos


Caractersticas de la brotacin

Aunque en las regiones subtropicales, la formacin y desarrollo de nuevos


brotes se presenta en 3 o 4 ciclos definidos, el ms importante es la brotacin
/ 90 /

Fisiologa de la floracin y fructificacin en los ctricos

de primavera, que ocurre tras el perodo de bajas temperaturas invernales3, 4,


7, 8
; en el trpico y algunas regiones semitropicales, la brotacin tiene lugar
durante todo el ao en ciclos de corta duracin, separados por perodos de
inactividad9.
Los factores que determinan el nmero de brotaciones y la floracin no
son bien conocidos. En los trpicos se sugiere que el estrs hdrico es el principal factor que afecta la floracin, mientras que en los subtrpicos son las bajas
temperaturas de invierno las que concentran la floracin en primavera2,3,8. Se
sabe que una prolongada sequa o temperaturas del suelo inferiores a 12 C
provocan la entrada en latencia de las yemas. El aumento en la temperatura
del suelo o la restauracin de los perodos de precipitacin incrementan el
porcentaje de nudos brotados, al modificar el balance en la sntesis y/o transporte de hormonas de la raz al brote10.
En el departamento del Tolima, localidad del Espinal con 41218.8 de
latitud norte y 745256.6 de latitud este, y a una altura de 335 msnm, se
presenta un patrn de distribucin de lluvias bimodal con dos picos mximos
en los meses de mayo y noviembre. Del mismo modo, se registra un dficit
hdrico durante la mayor parte del ao, con excepcin en los meses de mayor
precipitacin, con un promedio anual de 1400 mm y una evaporacin anual
de 1990 mm (figura 1).

Figura 1. Balance hdrico tomado de la serie climtica de 32 aos


de la estacin climtica de Corpoica. C. . Nataima (Tolima).
A. Rebolledo. Figura original.
/ 91 /

Alexander Rebolledo Roa

En esta localidad, al correlacionar el comportamiento de la precipitacin


con las curvas de abscisin desde antesis, y tomando como referencia la distribucin de lluvias en el 2009, antes del inicio de la floracin se presenta un
pico mximo de precipitacin de 39 mm despus de presentarse un perodo
de estrs de 18 das con aproximadamente 5 mm/da (figura 2). En otros estudios, la caracterizacin del efecto del estrs hdrico sobre la induccin floral
se ha centrado fundamentalmente en limn11 y lima12. Dos semanas de limitacin en el suministro de agua, que provocan un estrs hdrico moderado (-2,1
MPa de potencial de presin en el xilema de la hoja medido al medioda), son
suficientes para inducir la formacin de brotes reproductivos12.

Figura 2. Relacin entre abscisin relativa de estructuras


reproductivas en lima cida Tahit y precipitacin,
bajo condiciones del Espinal Tolima. A. Rebolledo. Figura original

Tipos de inflorescencias

En ctricos se distinguen normalmente cinco tipos de brotes (figura 3)


y dependiendo de la proporcin de flores y hojas se clasifican as: multifloral con hojas, multifloral sin hojas, unifloral con hojas, unifloral sin hojas
y vegetativo13-15. En plantas adultas de la mayor parte de las especies de
ctricos, las flores se desarrollan lateralmente en el tallo a partir de yemas
axilares en reposo. Los brotes florales originados son de crecimiento determinado, y estn culminados por una flor, y los vegetativos de crecimiento
indeterminado16,17.
/ 92 /

Fisiologa de la floracin y fructificacin en los ctricos

Figura 3. Tipos de inflorescencias: A) Uniflorales con hojas, B) Uniflorales sin


hojas, C) Multiflorales con hojas, D) Multiflorales sin hojas y D) Vegetativos. Rebolledo A.

La proporcin en la que se presenta cada tipo de brote depende de


factores endgenos como la variedad y el nivel de brotacin, y de factores
ambientales18. Bajo condiciones del Espinal Tolima-, en lima cida Tahit, las inflorescencias multiflorales (M) y multiflorales con hojas (MCH)
tienen una mayor participacin en la floracin global, y las inflorescencias
uniflorales con hojas se presentan en menor proporcin (figura 4a). A
pesar de presentar una mayor proporcin de inflorescencias multiflorales,
la que representan un mayor aporte a la cosecha, son las campaneras o
uniflorales con hojas (figura 4b).

Figura 4. Participacin de inflorescencias en la floracin global del rbol


(A) y aporte a la cosecha de cada tipo de inflorescencia
(B). A. Rebolledo. Figura original
/ 93 /

Alexander Rebolledo Roa

El proceso de abscisin y cuajado del fruto


Abscisin
La abscisin es un proceso selectivo que es afectado por las caractersticas
de las flores / frutos. Los frutos pequeos que presentan una menor velocidad
de crecimiento son los de mayor probabilidad de caer del rbol19,16, aunque
esta relacin entre vigor y abscisin no es estricta, y con frecuencia frutos de
elevado vigor presentan una reduccin brusca en su velocidad de crecimiento,
que precede a su abscisin20.

En rboles de Citrus, se distinguen dos ondas de abscisin sucesivas que


afectan la floracin y el desarrollo de los frutitos, aunque en algunos casos la
abscisin se presenta como un proceso continuo que alcanza un valor mximo entre 6 y 8 semanas despus de la floracin y se completa alrededor de 12
semanas despus de su inicio21. La primera onda induce masivamente la abscisin de flores y ovarios, mientras que la segunda, reduce el nmero de frutos
que ya presentan un crecimiento significativo, durante la cada de junio22-27.
Bajo condiciones del Tolima en trminos relativos se presentan tres mximos
de cada, en estrecha relacin con la abscisin acumulada. El primer pico de
cada se presenta a 6 das despus de antesis (dda), relacionado con la cada de
flores y frutos recin cuajados, y los dos restantes a los 34 y 49 dda relacionados con frutos en crecimiento (figura 5).

Figura 5. Abscisin acumulada y relativa de flores y frutos de lima cida Tahit


bajo condiciones del Espinal Tolima. A. Rebolledo. Figura original.
/ 94 /

Fisiologa de la floracin y fructificacin en los ctricos

La abscisin es el resultado de una compleja combinacin entre factores nutricionales y seales hormonales28-30. Los factores nutricionales actan
como factores limitantes que afectan al crecimiento provocando su abscisin,
mientras que el componente hormonal acta como regulador de los procesos
involucrados en la abscisin31. En naranjas, se ha sugerido un aumento en la
abscisin del fruto por estimulacin directa o indirecta en la produccin de
etileno, seguido por una secuencia de eventos que involucran: la iniciacin en
la expresin de genes de la celulasa y poligalacturonasa, sntesis de novo de
enzimas hidrolticas en las zonas de abscisin del fruto, degradacin de polmeros de la pared celular y finalmente separacin de rganos28,32.
La abscisin por el pedicelo no parece estar relacionada con la disponibilidad de carbohidratos, ya que esta ocurre cuando las reservas de carbohidratos
en el rbol se mantienen altas8,20,33,34. Esta abscisin est precedida por una
reduccin en la tasa de crecimiento. La disminucin en el transporte de carbohidratos al parecer se debe a una baja capacidad de sumidero, ms que a la
limitacin en la fuente20,35.
Trabajos realizados por Iglesias; et al.25, con anillado en mandarina Satsuma,
plantean la existencia de una correlacin entre el contenido en carbohidratos,
la produccin de etileno y la abscisin del fruto por la base del pedicelo. Estos
autores sugieren que las condiciones que determinan niveles altos de azcares
(anillado de ramas) incrementan el contenido en carbohidratos, disminuyen la
produccin de etileno y la tasa de abscisin, y que una condicin opuesta (anillado del pedicelo) reduce la disponibilidad de carbohidratos e incrementa el
etileno y la abscisin. Aunque no encontraron evidencias claras del papel regulador del etileno, sugieren que el contenido en carbohidratos y el etileno liberado
son dos componentes principales de los procesos de abscisin por esta zona.
La abscisin posterior del fruto es principalmente determinada por factores nutricionales tales como fotoasimilados20,34,36,37. En este perodo, la tasa de
acumulacin de materia seca del fruto excede la capacidad fotosinttica de las
hojas de la inflorescencia38,39. En efecto, se establece una competencia por los
carbohidratos disponibles en el resto de la planta, con un consiguiente agotamiento de las reservas. El nivel de sacarosa en las hojas cae a valores bajos,
demostrando una limitacin en el suministro de carbohidratos34,40. La disminucin en la abscisin de frutos durante este perodo, cuando la disponibilidad de carbohidratos fue incrementada por un aumento en la fotosntesis41 o
por anillado34, refuerza la hiptesis de que la abscisin est relacionada con la
competencia entre frutos por carbohidratos.
/ 95 /

Alexander Rebolledo Roa

La abscisin en relacin con el dficit de carbohidratos que se presenta por


la competencia entre sumideros (fruto-fruto), ha sido explicada por Gmez
Cadenas; et al.31, refirindose a un incremento en los niveles de ABA y ACC,
y a una mayor liberacin de etileno.
Cuajado
El cuajado se define como la fase del desarrollo que marca la transicin de
una flor (ovario) a un frutito que se desarrollar hasta la madurez42. En Citrus,
la tasa final de cuajado solo puede ser determinada despus que la abscisin
se ha detenido, 10 a 12 semanas despus de antesis17. En este sentido, Agust;
et al.16 diferencian entre cuajado inicial, como el porcentaje de ovarios que
reanudan el crecimiento despus de la antesis, y cuajado final, medido como
porcentaje del nmero de flores que forman finalmente un fruto.

La transicin del ovario a un fruto en desarrollo con capacidad potencial para


convertirse en un fruto maduro es regulada por hormonas, especficamente por giberelinas23,43 La deficiencia de giberelinas durante este periodo resulta en una cada
masiva de ovarios, bajo cuajado de fruto y en una reduccin de la cosecha43,44.
En los cultivares con semilla, el cuajado depende de la polinizacin y la
fecundacin. Buena parte de los cultivares de ctricos son partenocrpicos y,
por tanto, capaces de producir frutos sin semillas. Ejemplos notables de este
comportamiento son las naranjas del tipo Navel, Salustiana, las mandarinas
del grupo Satsuma, diversas selecciones de clementinas y la lima Tahit45-47.
El aporte hormonal para el cuajado del fruto en variedades partenocrpicas
est referido al contenido hormonal de las paredes del ovario30. En algunos cultivares de mandarina Clementina y algunos hbridos, el cuajado de frutos partenocrpicos puede ser incrementado con la aplicacin de giberelinas exgenas, lo
que sugiere una deficiencia en los niveles endgenos de esta hormona23.
El rol de las giberelinas en el cuajado del fruto en ctricos est generalmente
aceptado30. Sin embargo, en mandarina Satsuma as como en las naranjas del tipo
Navel, la aplicacin exgena de giberelinas tuvo solamente un efecto transitorio
en el crecimiento del fruto y retras la abscisin, pero no se obtuvo un aumento
en la cosecha final16.
Las variedades con semillas cuajan con ms facilidad que las que no tienen semillas. Sin embargo, en la mayor parte de las variedades de ctricos el
nmero de flores formado es suficiente para obtener una cosecha mxima. El
nmero de flores producido por la planta llega a estar inversamente relacionado con el porcentaje de frutos finalmente cuajados18,48,49.
/ 96 /

Fisiologa de la floracin y fructificacin en los ctricos

Crecimiento y desarrollo del fruto


Estados de desarrollo del fruto
El modelo de crecimiento de frutos ctricos presenta una curva sigmoidal simple, descrito en 1958 por Bain para la variable peso fresco en frutos
de naranjo. Posteriormente, Goren y Monselise50 para la misma especie y
Guardiola y Lzaro51, en frutos de mandarina Satsuma (Citrus unshiu Marc),
encontraron el mismo tipo de curva. En un estudio llevado a cabo en la localidad de Espinal Tolima-, se verifica el mismo comportamiento para lima
cida Tahit.

Este modelo se presenta desde la antesis hasta la maduracin y en l se distinguen tres fases: la fase I se caracteriza por un aumento en grosor del pericarpio como resultado de una alta divisin celular; esta fase es considerada como
de crecimiento exponencial y se inicia desde antesis hasta la cada fisiolgica
del fruto; la fase II se caracteriza por la vacuolizacin y alargamiento de las
clulas de las vesculas e incremento de los lculos, y se considera como fase de
crecimiento lineal; en la fase III se presenta una reduccin marcada en la tasa
de crecimiento, indicando la entrada a la etapa de maduracin del fruto51-56.
Durante el crecimiento inicial del fruto (fase I), el mesocarpo se encuentra dividido en mesocarpo externo, compuesto por clulas pequeas, poco
vacuoladas, paredes delgadas y abundante citoplasma, el cual es considerado
como un meristemo activo que origina clulas hacia el interior, y en mesocarpo interno, compuesto de clulas de mayor dimetro, con paredes que se
van engrosando hacia el final de esta fase54,57 (Figura 6b). Antes de antesis,
las vesculas se inician como primordios a lo largo de la superficie adaxial de
la pared del endocarpo. Las vesculas surgen como resultado de divisiones
anticlinales y periclinales de clulas epidrmicas y subepidermicas del endocarpo56,58 (Figura 6a).
La duracin de la segunda fase de desarrollo del fruto depende de la variedad, que oscila entre 2 y 3 meses para variedades precoces y ms de 5 para
variedades tardas. En este perodo, cesa la actividad meristemtica de las vesculas en el endocarpo y sus clulas se vuelven altamente vacuoladas, y alcanzan su mxima longitud y volumen56,58 (Figura 6C). En trminos absolutos y
relativos, el crecimiento en tamao durante el estado II se debe principalmente al crecimiento de los segmentos. Al respecto, Bain59 describe que al final del
estado I, el eje central y los segmentos ocupan solo el 5% del volumen total
del fruto, mientras que al final del estado II, representan el 58% del volumen
y el 67% del peso fresco del fruto.
/ 97 /

Alexander Rebolledo Roa

En la fase de maduracin del fruto (fase III), la elongacin celular se detiene, hay acumulacin de slidos solubles especialmente azcares y compuestos
nitrogenados y los cidos libres disminuyen como consecuencia de su dilucin y metabolizacin56,58.

Figura 6. Caractersticas anatmicas de los tejidos de frutos de Citrus sinensis (L)


Osbeck. Variedad Salustiana, de 5 (A), 31 (B) y 45 (C) das despus de antesis:
ex: exocarpo ga: glndulas de aceite, m: mesocarpo, me: mesocarpo externo,
mi: mesocarpo interno, hvd: haz vascular dorsal, hvs: haz vascular septal, hvm:
haz vascular marginal, f: filamento de la vescula, eg: emergencias glandulares, s:
septos, v: vesculas. Tomado de Rebolledo et al., 2007
/ 98 /

Fisiologa de la floracin y fructificacin en los ctricos

Factores que determinan el tamao del fruto


El tamao del fruto est determinado por factores internos que, expresados en trminos de transporte en la planta, hacen referencia a su capacidad
de sumidero, determinado en parte, pero no exclusivamente por el potencial
gentico del fruto, y factores externos, que determinan la disponibilidad de
metabolitos para el crecimiento del fruto60-62. Estos parmetros estn relacionados de un modo sutil, y una reduccin en el suministro de metabolitos
durante el desarrollo temprano del fruto puede ocasionar daos irreversibles
en la capacidad de sumidero y reducir su tasa de crecimiento en estados posteriores, cuando el suministro no constituye un factor limitante62.
Factores internos del fruto
La capacidad sumidero del fruto es considerada como el factor dominante
en la competencia por fotoasimilados y est determinada inicialmente por la
calidad de la flor que, a su vez, depende de la naturaleza de la inflorescencia y
del nmero de flores formadas en el rbol47.

El potencial de crecimiento del fruto parece estar determinado tempranamente en su desarrollo. El tamao del ovario en antesis est inversamente
relacionado con el nmero de flores63. Un mayor tamao de ovario en antesis
se traduce en un crecimiento temprano ms acelerado del fruto y en un aumento en su tamao final61.
En varios cultivares de naranja y mandarina se ha establecido una relacin
inversa entre el nmero de flores y el tamao del fruto60. El nmero de flores
tambin influye sobre la calidad de la flor. Una reduccin en el nmero de
flores est acompaada de un incremento en el porcentaje de inflorescencias
con hojas y un crecimiento vegetativo ms vigoroso2,15.
El nmero de frutos finalmente cosechados es una estimacin incompleta
de los fenmenos de competencia en la fructificacin. Un nmero muy elevado de flores y de frutitos se desprenden durante diversos estadios de desarrollo
y la cantidad de metabolitos utilizada en su formacin puede representar un
porcentaje importante del total utilizado en la fructificacin63.
Factores externos del fruto
El factor limitante para el crecimiento del fruto cambia durante los distintos estados de desarrollo del fruto. El peso individual del fruto en madurez
est inversamente relacionado con la cantidad de frutos por rbol48,61. La competencia por fotoasimilados entre frutos explica esta relacin48. Estudios que
/ 99 /

Alexander Rebolledo Roa

involucran la translocacin de metabolitos con 14C64, o que indican el incremento en el cuajado y crecimiento inicial en naranja Valencia al crecer en una
atmsfera enriquecida con CO241,65 confirman el efecto de la disponibilidad
de carbohidratos en el desarrollo del fruto.
Independientemente del nmero de flores inicialmente formadas, la supervivencia de los frutos en desarrollo parece estar determinada por la capacidad
del rbol para suministrar metabolitos. En ctricos se ha establecido que los
frutos en desarrollo importan asimilados de hojas viejas y que las hojas jvenes
no exportan fotoasimilados hasta que su crecimiento es completado al inicio
del perodo de elongacin celular36.
La fotosntesis parece ser crucial en determinar el cuajado del fruto66.
Una disminucin en el nmero de hojas36, o una inhibicin de la actividad fotosinttica reduciendo la cantidad de luz67, inducen una mayor
abscisin. Contrariamente, experimentos con anillado, aclareo de frutos
o suplementacin de sacarosa resultan en un aumento del porcentaje de
cuajado, por el incremento de la disponibilidad de azcares para el fruto
en desarrollo37.
En rboles de Citrus unshiu, la defoliacin total o parcial en antesis no
reduce los niveles de carbohidratos en frutos en desarrollo pero s incrementa significativamente la primera onda de abscisin36. Agusti; et al.68 plantean
en mandarina Satsuma cv Okitsu, una reduccin en la disponibilidad de
carbohidratos inducida por defoliacin, que provoca la abscisin de frutos
durante el estado de elongacin celular.
Aparte de las limitaciones en la fuente o en la capacidad de sumidero, la
tasa de crecimiento del fruto puede ser potencialmente limitada por la capacidad del camino de transporte. El sistema vascular del pedicelo muestra un
aumento gradual en el nmero de tubos cribosos y vasos, hasta completar su
desarrollo al final de la cada de junio, coincidiendo con la fase lineal de acumulacin de materia seca62,69.
Bustan; et al.70 sugieren una posible dependencia entre la tasa de crecimiento del fruto y la capacidad del sistema de transporte, al demostrar una
estrecha relacin entre tamao de fruto y rea en seccin transversal del pedicelo. Garca Luis; et al.35 encontraron que la relacin entre la vascularizacin
del pedicelo y el tamao del fruto parece ser ms la consecuencia que la causa
de las diferencias en la tasa de crecimiento del fruto, y demuestran que las
diferencias en vascularizacin siguen y no preceden las diferencias en la tasa
de crecimiento.
/ 100 /

Fisiologa de la floracin y fructificacin en los ctricos

Conclusiones y recomendaciones
La fisiologa de la produccin se ha convertido en el principal soporte
para entender el comportamiento productivo en ctricos. Este enfoque ha
permitido el desarrollo de prcticas de manejo de la produccin, a travs de la
manipulacin exgena de la floracin y cuajado del fruto con el uso de reguladores de crecimiento para mejorar la calidad comercial del fruto, prcticas
de anillado, entre otras.
Como primer paso, bajo condiciones del trpico colombiano es indispensable la generacin de conocimiento bsico que permita determinar el modelo
fenolgico de la especie, considerando las variaciones edafoclimticas caractersticas de los distintos ncleos productivos. La produccin de ctricos en
el pas se localiza en cuatro ncleos geogrficos productores: Costa Atlntica,
Llanos, Santanderes y Regin Centro Occidente. El poco conocimiento que
se tiene sobre los parmetros ecofisiolgicos que determinan el crecimiento y
desarrollo del fruto en cada uno de ellos, hace que las opciones tecnolgicas
tengan un carcter general. El desarrollo tecnolgico alcanzado bajo condiciones subtropicales sirve como informacin de partida para ajustar metodologas y tcnicas que permitan ir construyendo la plataforma de manejo de la
especie bajo condiciones del trpico colombiano.
Referencias bibliogrficas
1. GOLDSCHMIDT; E. E. & GOLOMB; A. The carbohydrate balance of alternative bearing Citrus trees and the significance of reserves for flowering and
fruiting. In: J. Amer. Soc. Hort. Sci. 1982. Vol. 107. p. 206 - 208.
2. GUARDIOLA, J. L. Flower initiation and development in Citrus. In: Proc. Int.
Soc. Citricult. 1981. Vol. 1. p. 242-246.
3. MONSELISE, S. P. Citrus and related genera. In: HALEVY, A. H. (Ed.). Boca
Raton, Florida: CRC Handbook of flowering. 1985. p. 257-294. Vol. 2.
4. DAVENPORT, T. L. Citrus flowering. In: Hort. Rev. 1990. Vol. 12. p. 349-408.
5. GARCA, Luis A.; et al. The transport of sugars in developing fruits of Satsuma
mandarin. In: Ann. Bot. 1991. Vol. 68. p. 349 - 357.
6. RIAO, N. M.; et al. Estudio de crecimiento, fenologa y pronstico de cosecha
en naranja Valencia sobre Sunky x English y citrumelo 4475 en la zona centro
occidente de Colombia. Chinchin: Asocitricos-Cenicaf, 2006. 43 p.
7. GUARDIOLA, J. L.; AGUST, M. & GARCA-MAR, F. Gibberellic acid and
flower bud development in sweet orange. In: Proc. Int. Soc. Citricult. 1977. Vol.
2. p. 696-699.
/ 101 /

Alexander Rebolledo Roa

8. GARCA, Luis A.; et al. . The regulation of flowering and fruit set in Citrus:
Relationship with carbohydrate levels. In: J. Bot. 1988. Vol. 37. p. 189-201.
9. CASSIN, J.; et al. The influence of climate upon the blooming of citrus in tropical areas. In: Proc. Int. Soc. Citricult. 1969. Vol. 1. p. 315-323.
10. HALL, A. E.; KHAIRI, M. & ASBELL, C. W. Air and soil temperature effects
on flowering of Citrus. In: J. Amer. Soc. Hort. Sci. 1977. Vol. 102. p. 261-263.
11. NIR, I.; GOREN, R. & LESHEM, B. Effect of water stress, gibberellic acid and
2-chloroethyl thriethylammonium chloride (CCC) on flower differentiation in
Eureka lemon. In: J. Am. Soc. Hortic. Sci. 1972. Vol. 97. p. 774-778.
12. SOUTHWICK, S. M. & DAVENPORT, L. Characterization of water stress
and low temperature effects on flower induction in Citrus. In: Plant Physiol.
1986. Vol. 81. p. 26-29
13. SAUER, M. R. Growth of orange shoots. In: Aust. J. agric. Res. 1951. Vol. 2.
p. 105-17.
14. LENZ, F. Flower and fruit development in Valencia Late orange as affected by
type of inflorescence and nutritional status. In: Hort. Res. 1966. Vol.6. p. 65-78.
15. MOSS, G. I. Influence of temperature and photoperiod on flower induction
and inflorescence development in sweet orange (Citrus sinensis L. (Osbeck)). In:
J. hort. Sci. 1969. Vol. 44, No. 4. p. 31 1-20.
16. AGUST, M.; GARCIA-MARI, F. & GUARDIOLA, J. L. The influence of
flowering intensity on the shedding of reproductive structures in sweet orange.
In: Scientia Hortic. 1982. Vol. 17. p. 343-352.
17. SPIEGEL-ROY, Pinhas & GOLDSCHMIDT, Eliezer. Biology of Citrus. Cambridge, UK: Cambridge University Press, 1996. 230 p.
18. BECERRA, S. R. & GUARDIOLA J. L. Inter-relationship between flowering
and fruiting in sweet orange, cultivar Navelina. In: Proceedings of the International Society of Citriculture. 1984. Vol. 1. p. 190-194.
19. ZUCCONI, G.; MONSELISE, S. P. & GOREN, R. Growth-Abscission Relationships in developing orange fruit. Scientia Horticulturae. October 1978. Vol.
9, No. 2. p. 137-146
20. RUIZ, R. & GUARDIOLA, J. L. Carbohydrate and mineral nutrition of orange
fruitless in relation to growth and abscission. In: Physiologia Plantarum. 1994.
Vol. 90. p. 27-36.
21. DUARTE, A. M. & GUARDIOLA, J. L. Flowering and fruit set on Fortune
hybrid mandarin: Effect of girdling and growth regulators. In: Proc. Int. Soc.
Citriculture. 1996. Vol. 1. p. 1069-1071.
/ 102 /

Fisiologa de la floracin y fructificacin en los ctricos

22. GOLDSCHMIDT, E. E. Carbohydrate supply as a critical factor for citrus fruit development and productivity. In: J. Amer. Soc. Hort. Sci. 1999. Vol. 34. P. 1020-1024.
23. GUARDIOLA, J. L. Regulation of flowering and fruit development: Endogenous factors and exogenous manipulation. Proc Int Soc Citriculture. 2000. Vol.
9. p. 342-346.
24. GOREN, R.; HUBERMAN, M. y ZHONG, G. Y. Basics aspects of hormonal
control of abscission. In: Proc Int Soc Citriculture. 2000. Vol. 9. p. 591-594.
25. IGLESIAS, D. J. & TADEO, F. Carbohydrate and ethylene levels related to
fruitlet drop through abscission zone A in Citrus. In: J. Amer. Soc. Hort. Sci.
2006. Vol. 20, No 3. p. 348-355.
26. LASKOWSKI, L. Caractersticas de la abscisin del fruto de naranja Citrus sinensis (L). Osbeck. Var. Salustiana. In: Bioagro. 2006. Vol. 18, No 1. p. 25 30.
27. PREZ, M. & JIMNEZ, A. Crecimiento y abscisin del fruto de naranja
Valencia (Citrus sinensis L. Osbeck) en un huerto del estado portuguesa, Venezuela. En: Bioagro. 2009. Vol. 21, No. 2. p. 133 137.
28. GOREN, R. Anatomical physiological and hormonal aspects of abscission in
Citrus. In: Hort. Rev. 1993. Vol. 15. p. 145-232.
29. GILLASPY, G.; BEN-DAVID, H. & GRUISSEM, W. Fruits: A developmental
perspective. In: Plant Cell. October 1993. Vol. 5, No 10. p. 14391451.
30. TALN, M, et al. Hormonal regulation of fruit set and abscission in Citrus: classical concepts and new evidence. In: Acta Hort. 1997. Vol. 463. p. 209-217.
31. GMEZ-CADENAS, A.; et al. Hormonal regulation of fruitlet abscission induced by carbohydrate shortage in citrus. In: Planta. 2000. Vol. 210. p. 636 - 643.
32. KAZOKAS, W. C. & BURNS, J. K. Cellulase activity and gene expression in
Citrus fruit abscission zones during and after ethylene treatment. In: J. Amer.
Soc. Hort. Sci. 1998. Vol. 123, No 5, p. 781 786.
33. ERNER, Y. Citrus fruit set: carbohydrate, hormone and leaf mineral relatinships. In: Wright CJ (ed) Manipulation of fruiting butterworth, 1989. p 233242.
34. RUIZ, R; et al. Carbohydrate availability in relation to fruitlet abscission in
Citrus. In: Ann. Bot. 2001. Vol. 87. p. 805-812.
35. GARCA, Luis A.; et al. Dry matter accumulation in Citrus fruit is not limited
by transport capacity of the pedicel. In: Ann. Bot. 2002. Vol. 90. p. 755-764.
36. MEHOUACHI, J. Defoliation increases fruit abscission and reduces carbohydrate levels in developing fruits and woody tissues of Citrus unshiu. In: Plant Sci.
1995. Vol. 107. p. 189-197.
/ 103 /

Alexander Rebolledo Roa

37. IGLESIAS, D. J.; et al. Fruit set dependence on carbohydrate availability in


Citrus trees. In: Tree Physiol. 2003. Vol. 23. p. 199-204.
38. MOSS, G. I.; STEER, B. T. & KRIEDEMAN, P. E. The regulatory role of
inflorescence leaves in fruit-setting by sweet orange (Citrus sinensis). In: Physiol.
Plant. 1972. Vol. 27. p. 432-438.
39. MARTNEZ-CORTINA, C. & SANZ, A. Comparison between the effect of
the fruit and of exogenous GA3-applications on source-sink relationships in Citrus sprouts. In: Ann Bot. 1991. Vol. 68. p. 143-149.
40. SANZ, A; et al. Changes in carbohydrates and mineral elements in Citrus leaves
during flowering and fruit set. In: Physiologia Plantarum. 1987. Vo. 69. p. 93-98.
41. DOWNTON, W.; GRANT, W. & LOVEYS, B. Carbon dioxide enrichment
increases yield of Valencia orange. In: Aust. J. Plant Physiol. 1987. Vol. 14. p.
493 - 501.
42. LEOPOLD, A. C. & KRIEDMAN, P. E. Plant growth and development. 2 ed.
New York: Mc-Graw Hill, 1975. 545 p.
43. TALON, M.; ZACARIAS, L. & PRIMO-MILLO, E. Gibberellins and parthenocarpic ability in developing ovaries of seedless mandarins. In: Plant Physiol.
1992. Vol. 99. p. 1575-1581
44. BEN-CHEIKH, Wadii; et al. Pollination increases gibberellin levels in developing ovaries of seeded varieties of Citrus. Plant Physiology. June 1997. Vol. 114,
no. 2. p. 557-564.
45. GONZALEZ-SICILIA; E. El cultivo de los agrios. 3 ed. Valencia: Editorial
Bello. 1968.
46. TALN, M.; ZACARAS, L. & PRIMO-MILLO, E. Hormonal changes associated with fruit set and development in mandarins differing in their parthenocarpic ability. In: Physiologia Plantarum. 1990. Vol. 79. p. 400 406.
47. GUARDIOLA, J. L. Overview of flower bud induction, flowering and fruit set.
In: The citrus flowering and fruiting short course. Univesity of Florida (USA)
Institute of Food and Agricultural Sciences. Futch , S. H. and Kender, W. J.
1997. p. 5-24.
48. GOLDSCHMIDT; E. E. & MONSELISE, S. P. Physiological assumptions
toward the development of a Citrus fruiting model. In: Proc. Int. Soc. Citriculture. 1977. Vol. 2. p. 668-672.
49. AGUST, M.; ALMELA, V. & GUARDIOLA, J. L. The regulation of fruit
cropping in mandarins through the use of growth regulators. In: Proceedings of
the International Society of Citriculture. 1981. Vol. 1. p. 216-220.
/ 104 /

Fisiologa de la floracin y fructificacin en los ctricos

50. GOREN, R. & MONSELISE, S. P. Survey of hesperidin and nitrogen in the developing flower of the Shamouti orange tree. In: J. Amer. Soc. Hort. Sci. 1964.
Vol. 85. p. 218-223.
51. GUARDIOLA, J. L. & LZARO, E. The effect of synthetic auxins on fruit
growth and anatomical development in Satsuma mandarin. Scientia Horticulturae. March 1987. Vol. 31, No. 1-2. p. 119-130
52. SCHNEIDER, H. The anatomy of Citrus. In: The citrus industry. Vol. 2,
Reuther, W., Batchelor, L.D. and Webber, (Eds.). University of California,
EE.UU. 1968.
53. TISSERAT, Brent; JONES, Danny & GALLETTA, Paul. Growth responses
from whole fruit and fruit halves of lemon cultured in vitro. In: American Journal of Botany. Feb. 1987. Vol. 76, No. 2. p. 238 - 246.
54. TADEO, F. & PRIMO-MILLO, E. Ultrastructural changes in the developing
ovaries of Citrus. In: Proc. Int. Soc. Citriculture. 1988. Vol. 2. p. 417 429
55. COGGINS, C. W. & Henning, G. L. Grapefruit rind blemish caused by interaction of gibberellic acid and wetting agents. International Citrus. In: Congress
(6th : 1988 : Tel Aviv, Israel) : Margraf. 1988. p. 333-338.
56. BURNS, J.; ACHOR, D. & ECHEVERRIA, E. Ultrastructural studies on the
ontogeny of Grapefruit juice vesicles (Citrus paradisi Macf. Cv Star Ruby). In:
Int. J. Plant Sci. 1992. Vol. 153, No 1. p. 14 - 25.
57. REBOLLEDO, A.; GARCA, Luis A. y GUARDIOLA, J. L. Efecto del cido
indolactico sobre el desarrollo in vitro de los tejidos del fruto del naranjo dulce.
En: Acta Agronmica. 2007. Vol. 56, No. 4. p.177 185.
58. ROTH, I. Fruits of angiosperms. In: Encyclopedia of Plant Anatomy. 1977. Vol.
10, 675 p.
59. BAIN, J. M. Morphology, anatomical and physiological changes in the developing fruit of the Valencia orenge, Citrus sinensis (L.) Osbeck. In: Australian
Journal of Botany. 1958. Vol. 6, no 1. p. 1 - 23
60. GUARDIOLA, J. L. Factores internos que determinan el tamao del fruto en
los agrios. En: Levante Agrcola. 1987. p. 247-250.
61. ________. Factors limiting productivity in Citrus. A physiological approach.
In: Proc. Int. Soc. Citriculture. 1988. Vol. 2. p. 381-394.
62. GUARDIOLA, J. L. & GARCA-LUIS, A. Increasing fruti size in Citrus. Thinning and stimulation of fruit growth. In: Plant Growth Regul. 2000. Vol. 31.
p. 121-132.
/ 105 /

Alexander Rebolledo Roa

63. GUARDIOLA, J. L.; GARCA-MARI, F. & AGUST, M. Competition and


fruit set in the Washington navel orange. In: Physiologia Plantarum. 1984. Vol.
62. p. 297-302.
64. POWELL, A. A. & KREZDORN, A. H. Influence of fruit-setting treatment on
translocation of metabolites-C-14 in Citrus during flowering and fruiting. In: J.
Amer. Soc. Hort. Sci. 1977. Vol. 102, No. 6. p. 709-714.
65. IDSO, S. B.; KIMBALL, B. A. & ALLEN, S. G. Net photosynthesis of sour
orange trees maintained in atmospheres of ambient and elevated CO2 concentration. In: Agric Forest Meteorol. 1991. Vol. 54. p. 95-101.
66. IGLESIAS, D. J.; et al. Regulation of photosynthesis through source:sink imbalance in Citrus is mediated by carbohydrate content in leaves. In: Physiol. Plant.
2002. Vol. 116. p. 563-572.
67. BERTER, J. & DROZ, P. Studies on locating the signal for fruit abscission in
the apple tree. In: Scientia Hortic. 1991. Vol. 46. p. 201-214.
68. AGUST, M.; et al. The synthetic auxin 3,5,6-TPA stimulates carbohydrate
accumulation and growth in Citrus fruit. In: Plant Growth Regul. 2002. Vol.
36, no 2. p.141-147.
69. LASKOWSKI; et al. Vascularizacin del pedicelo y crecimiento del fruto de Citrus sinensis var. Salustiana y su relacin con el contenido de cido indolactico.
In: Bioagro. 2008. Vol. 20, No 1 p. 11 20.
70. BUSTAN, A.; ERNER, Y. & GOLDSCHMIDT, E. Interactions between developing Citrus fruits and their supportive vascular system. In: Ann. Bot. 1995.
Vol. 76. p. 657-666.

/ 106 /

Captulo 4 / Chapter 4

La ecofisiologa de los ctricos en


el trpico: el caso del Piedemonte
Llanero de Colombia
Javier Orlando Orduz-Rodrguez*

Resumen
Los ctricos son un cultivo subtropical, pero se cultivan ampliamente en la mayora de los pases tropicales en el mundo. La industria citrcola ms importante se realiza en el subtrpico y es en donde
se ha generado casi la totalidad de la informacin
cientfica. En condiciones subtropicales el principal
factor climtico que influye sobre el crecimiento y
desarrollo de las plantas ctricas es la variacin de las
temperaturas relacionadas con el ciclo anual de las
estaciones (verano-invierno), mientras que en condiciones tropicales el principal factor es la presencia o
ausencia de la precipitacin. En el trpico los ctricos
se cultivan desde 0 a 2000 msnm. Dependiendo de la
altitud las regiones citrcolas tropicales se clasifican:
en trpico alto (1500 a 2000 msnm), medio (800 a
1500 msnm) y bajo (0 a 700 msnm). Con los cambios de altitud, la temperatura modifica la sumatoria anual de unidades de calor acumuladas, factor de
gran importancia para la escogencia de las variedades
a cultivar en cada piso trmico.
*

ngeniero Agrnomo, Ph.D.


Coordinador Nacional Red
Frutales de Corpoica. C.. La
Libertad, Villavicencio.
Correspondencia:
[email protected]

Como modelo de desarrollo del cultivo, en el centro


de investigacin Corpoica La Libertad, ubicado en el
piedemonte del Meta (trpico bajo, suelos cidos y
terrazas altas bien drenadas), se ha venido realizando
/ 107 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez

desde el ao 1997 investigacin con ctricos. Este captulo, presenta


la informacin ms relevante obtenida de los estudios de fenologa,
nutricin vegetal, potencial de rendimiento, requerimientos y balance hdrico, induccin de la floracin, crecimiento del fruto y la respuesta de 26 genotipos de naranja a la oferta ambiental local.
Palabras clave: ctricultura tropical, crecimiento y desarrollo, genotipos de naranja, induccin floral, requerimientos hdricos, rendimientos.
Citrus ecophysiology in the tropic:
The case of Colombian plain regions foothill.
Abstract
Citrus crops are subtropical, but they are widely cultivated in most of
tropical countries, all over the world. The most important industry of
citrus is located in the subtropical zone, and this is the place in which
almost all of the scientific information has been generated. Under subtropical conditions, the main weather factor that influences the growth
and development of citrus plants is the variation of the temperatures
related to the annual season cycles (summer-winter). Under tropical
conditions, on the other hand, the main factor is the presence or absence of rains. In tropical zones, citrus are cultivated from 0 to 2000
meters above the sea level. Depending on the altitude, regions for cultivating citrus in the tropic are classified as high tropic (1500 to 2000
meters), mid (800 to 1500 meters) or low (0 to 700 meters). With altitude changes, the temperature modifies the annual sum of heat units
accumulated, a very important factor to choose the varieties to cultivate
in every thermal floor.
As a development model of the crop, in the Corpoicas La Libertad
research center, located in the Meta foothills (low tropic, acid soils and
well drained high terraces) research about citrus has been being made
since 1997. This chapter shows the most relevant information obtained
from the studies about phenology, plant nutrition, potential of performance, requirements and water balance, induction of the flowering,
fruits growth and the response of 26 orange phenotypes to the environmental local offer.
Keywords: tropical citrus cultivation, growth and development,
orange genotypes, flowering induction, water requirements, performances.
/ 108 /

La ecofisiologa de los ctricos en el trpico: el caso del Piedemonte Llanero de Colombia

ntroduccin
El cultivo comercial de las especies ctricas se basa en la exaltacin de los caracteres genticos y en el conocimiento de la influencia que el medio ambiente
(factores climticos y edficos) ejerce sobre su desarrollo. Las respuestas fisiolgicas de la planta provienen de la interaccin del genotipo (compuesto por
la variedad y el patrn), con el ambiente, y se constituyen en los mecanismos
endgenos que controlan el crecimiento y desarrollo de las plantas ctricas1.
El resultado de la cosecha final en ctricos, est relacionado con la eficiencia
de cada una de las fases fenolgicas que la componen, como: induccin floral,
floracin, cuajado y crecimiento del fruto, pues estas son plantas de desarrollo determinado. Por tanto el estudio de la relacin entre las condiciones
climticas en especial de la precipitacin con el comportamiento de las fases
fenolgicas es fundamental para mejorar la productividad de las mismas en
condiciones tropicales.
Las mayores producciones por hectrea y la mejor calidad de fruta para
consumo en fresco y produccin de concentrado de jugo de naranja, son obtenidas en regiones subtropicales, ubicadas entre los 25 a 40 de latitud en
ambos hemisferios2, estas regiones se conocen como los cinturones citrcolas;
son los pases ubicados all, los principales productores mundiales que abastecen la totalidad del mercado de la exportacin.
El desarrollo de la citricultura en estas regiones se ha consolidado a travs
de siglos de experiencia, gracias a la consolidacin de las instituciones y fuertes inversiones en investigacin y desarrollo tecnolgico que han optimizado
los sistemas productivos en estas condiciones geogrficas, especialmente en el
ultimo siglo (XX).
Por otro lado, la citricultura tropical con escasas excepciones, esta orientada al autoconsumo. Su productividad media y calidad de la fruta no son equiparables a las obtenidas en condiciones subtropicales. Existe escasa tradicin
empresarial en el cultivo y en informacin cientfica y tecnolgica. Lo anterior, seala la importancia del estudio de la ecofisiologa de los ctricos en las
condiciones tropicales de Colombia con el fin de mejorar las decisiones para
ampliar el rea de cultivo, seleccionar las mejores variedades y patrones para
cada localidad, aumentar las producciones por hectrea y mejorar la calidad
de la fruta. Adems, en la fruticultura moderna es fundamental producir a
bajos costos, ya sea para el mercado interno como para aumentar la participacin de los ctricos en las exportaciones a los nichos de mercado.
/ 109 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez

Clasificacin climtica de las regiones citrcolas tropicales


Las principales regiones citrcolas estn en las regiones tropicales bajas, medias y altas; las regiones subtropicales ridas y semiridas, y las subtropicales
hmedas3.

Una metodologa para diferenciar las regiones citrcolas, es usando el concepto de sumatoria de las unidades de calor anual. Esta se calcula tomando
la temperatura media diaria a la cual se le resta 12,5C, que corresponde a la
temperatura mnima necesaria para el crecimiento de los ctricos (0 biolgico)
y se multiplica por el nmero de das del ao; la sumatoria se representa como
unidades anuales de calor acumuladas4.
En los trpicos bajos (0 a 700 msnm) es en donde se obtienen las mayores tasas de unidades de calor acumuladas debido a las temperaturas altas y
permanentes. Las altas temperaturas medias aumentan la respiracin en las
plantas, lo que ocasiona la disminucin de los niveles de slidos solubles y de
acidez en la fruta2; mientras que en las condiciones de las regiones de media
altitud (800 a 1.500 msnm), la temperatura media es menor y por tanto las
tasas de respiracin tambin, lo que ocasiona que las frutas pierdan ms lentamente la acidez, y en el caso de variedades tardas como la naranja Valencia
la fruta madura presenta una alta acidez que afecta la calidad de consumo5,6.
En condiciones del piedemonte del Meta (trpico bajo) con 4930 unidades
de calor acumuladas en el ao, nueve meses y medio despus de la antesis, la
naranja Valencia obtiene bajos niveles de acidez y una relacin de SST/ATT
(slidos solubles totales/acidez total titulable) superior a 9.
Las zonas citrcolas tropicales se clasifican de la siguiente manera7:
t Trpico alto: comprendida entre los 1500 a 2000 msnm6, 8. Esta zona presenta baja acumulacin de unidades de calor. En algunas de estas regiones
se tienen selecciones regionales que se comercializan en mercados locales.
Es probable que mandarinas de bajos requerimientos en calor, como las
Satsuma y/o algunas selecciones de Clementina, puedan tener buen comportamiento en algunos sitios de esta regin.
t Trpico medio: Poseen alrededor de 3000 a 3800 unidades de calor acumuladas en el ao. Las regiones citrcolas colombianas ubicadas en la regin
Andina y en los valles interandinos (trpico medio), poseen un clima bimodal. En estas condiciones se presentan dos picos de floracin anual aunque
se puede presentar un nmero mayor, dependiendo de los ciclos de precipitacin, la cantidad de fruta presente en el rbol y la fertilizacin. La tasa
/ 110 /

La ecofisiologa de los ctricos en el trpico: el caso del Piedemonte Llanero de Colombia

de desarrollo del fruto en el trpico medio es lenta y las frutas alcanzan un


menor tamao que las producidas en el trpico bajo9.
t Trpico bajo: Presenta un clima clido, con alta humedad relativa en
la mayor parte del ao. Existen regiones que tienen periodos hmedos
intercalados con periodos secos (trpicos hmedos-secos), en los cuales
la humedad relativa presenta un comportamiento estacional10. Debido
a la abundante precipitacin y a las altas temperatura diurnas y nocturnas, las plantas alcanzan el mayor tamao comparado con otras regiones tropicales y subtropicales11. Se calcula que el tamao que alcanza
una planta en Israel en quince aos, lo alcanza en Costa Rica en seis
aos2. En estas condiciones las variedades de mejor comportamiento
son las clasificadas en la regin subtropical como tardas, siendo en
naranja las selecciones del grupo Valencia, las toronjas, la mandarina
Arrayana en Colombia y las limas cidas, sobresaliendo la lima cida
Tahit. El tangelo Minneola presenta un comportamiento productivo
intermedio pero tiene la ventaja en que en este piso trmico no tiene
daos graves de Alternaria.

Resultados de la investigacin de ctricos en el Piedemonte del


Meta
Colombia inici la investigacin de ctricos apenas en la dcada de 1930
en el Valle del Cauca la cual contino en las dcadas siguientes, amplindose a Tolima y Antioquia. Esta informacin permiti consolidar el desarrollo
citrcola realizado en la zona cafetera en la dcada de 1980. Posteriormente
Corpoica inicia sus investigaciones, en el ao 1996 para el piedemonte llanero
(trpico bajo), y en el 2003 para la altillanura plana.
La orientacin de la investigacin en el Centro ha estado basada en cuatro ejes fundamentales: 1. Zonificacin del cultivo y el manejo de los suelos
cidos. 2. El manejo integrado de plagas, enfermedades y malezas. 3. La evaluacin del comportamiento de variedades y patrones, y 4. La interaccin del
genotipo con el ambiente de las principales especies cultivadas.
Dentro de la informacin relevante que ha sido publicada, se tienen reportes sobre el comportamiento de la mandarina Arrayana en diferentes
patrones en condiciones de suelos cidos, la induccin de la floracin por
estrs hdrico, fenologa de las plantas y crecimiento del fruto. De la misma
forma se tienen recomendaciones para la zonificacin del cultivo, manejo
/ 111 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez

de correctivos, fertilizantes, densidades de plantacin, coberturas y manejo


integrado de plagas, enfermedades y malezas. Con el propsito de incrementar la produccin por planta, mejorar la calidad de la fruta y ampliar
la poca de cosecha se realizan actividades de evaluacin en variedades de
naranja, mandarina, toronjas y otros ctricos; tambin se tienen experimentos en los que se evalan nuevos patrones para naranja Valencia, tangelo
Minneola y mandarina Arrayana desde 1997.
Descripcin de las caractersticas ambientales del Piedemonte del Meta
El piedemonte del Meta presenta las caractersticas climticas del trpico
bajo con un rgimen de precipitacin monomodal, y sin modificaciones apreciables de longitud del da, ni de las temperaturas medias a lo largo del ao. El
Centro de Investigacin La Libertad de Corpoica, est ubicado en Villavicencio
(Meta) a una latitud de 4 03 N; longitud 73 29 W y una altitud de 336
msnm. La clasificacin climtica de la regin corresponde a bosque hmedo
tropical (IGAC, 2004), la temperatura y precipitacin media anual es de 26
C y 2.918 mm, respectivamente. Se presenta exceso de humedad para el cultivo
durante nueve meses (marzo a noviembre), y dficit de diciembre a febrero7.

Los suelos apropiados para el cultivo de ctricos en los Llanos Orientales,


son aquellos que se agrupan en la clase IV (Typic Haplustox), conocidos como
terrazas altas del piedemonte Llanero. Estos suelos presentan texturas franco
arenosas a franco arcillosas con un nivel fretico mayor de 3 metros; presentan
un pH cido, baja capacidad de intercambio catinico, alta saturacin de aluminio en el complejo de cambio y baja saturacin de bases, adems de bajos
niveles de materia orgnica, fsforo y elementos menores12; esta es la causa de
la necesaria aplicacin de correctivos antes del establecimiento y peridicamente con la fertilizacin13.

Produccin anual de las variedades de ctricos utilizadas comercialmente en la regin


Los resultados obtenidos en la evaluacin de los principales cultivares plantados en la regin se muestran en la figura 1. La distancia de plantacin utilizada fue de 8x6m (208 plantasha-1), para las tres especies (naranja Valencia,
mandarina Arrayana y lima Tahit y a 9x7m (158 plantas ha-1) para el hbrido
tangelo Minneola. En la figura 1, se muestran los resultados obtenidos durante 12 aos despus del transplante14. En esta evaluacin se utiliz el patrn
/ 112 /

La ecofisiologa de los ctricos en el trpico: el caso del Piedemonte Llanero de Colombia

Cleopatra que es el testigo regional. Las yemas para injertar las plantas fueron
tomadas de cultivos comerciales.
De acuerdo con la investigacin, la lima Tahit es el material ms precoz
y de mayor produccin en los primeros aos, aunque 6 aos despus del
transplante esta empieza a decrecer debido al dao de la tristeza de los ctricos (CTV). Por otro lado, el tangelo Minneola presenta una tarda entrada
a produccin lo cual esta relacionado con la necesidad que tiene de obtener
polinizacin cruzada de otras especies en especial de mandarina2.

Figura 1. Rendimiento de tres variedades de ctricos y un hibrido, en el C..


La Libertad, Villavicencio-Meta. Periodo comprendido entre 1997-2008.
Fuente: Mateus, et al. 2010.

Otro aspecto que esta limitando el potencial de rendimiento del tangelo es


la presencia del viroide de la Exocortis (CEVd). La produccin de mandarina
Arrayana, present una cada drstica durante el octavo y noveno ao despus del
transplante, cosechas 2005 y 2006 respectivamente. Este comportamiento estuvo
relacionado con la presencia de lluvias extemporneas durante la poca seca, lo
que ocasion que se anticipara la floracin por lo menos dos meses. La presencia
de la principal floracin durante la poca seca y en ausencia de riego, origin una
excesiva cada de flores y por ende una baja produccin en la cosecha de esos perodos. El cultivar de mejor comportamiento productivo fue la naranja Valencia lo
que seala la buena adaptacin de esta variedad a las condiciones ambientales del
piedemonte del Meta y a las prcticas de manejo agronmico del cultivo.
/ 113 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez

Estudios sobre la relacin entre el clima y las respuestas en


crecimiento y desarrollo de los ctricos en el Piedemonte del
Meta
Requerimientos y balance hdrico de la mandarina Arrayana en el piedemonte del Meta
En la figura 2, se presenta el balance hdrico del cultivo de mandarina
Arrayana. En esta se observa como las plantas soportan el estrs hdrico durante tres meses del ao (de diciembre a febrero), mientras que en los dems
meses la oferta hidrica es suficiente. El estrs hdrico ocasionado por dicha
ausencia de lluvias, proporciona las condiciones ambientales que originan la
induccin de la floracin; al iniciarse las lluvias en marzo, las plantas recuperan su turgencia y reinician sus procesos de crecimiento y desarrollo con
la brotacin vegetativa, y el posterior desarrollo de la floracin (dos semanas
despus de iniciarse la precipitacin al finalizar la poca seca). Al calcular los
requerimientos de las plantas se encontr que un cultivo adulto puede estar
requiriendo en promedio 1.046 mm de agua al ao, que es el 77% de la evaporacin total anual calculada15.

Figura 2. Balance hdrico entre la precipitacin promedia anual y la evapotranspiracin del cultivo de ctricos en el C.. La Libertad, Villavicencio - Meta.
Datos climticos promedio de 20 aos.
Fuente: Orduz y Fischer, 2007.

/ 114 /

La ecofisiologa de los ctricos en el trpico: el caso del Piedemonte Llanero de Colombia

Estudio del dficit hdrico en mandarina Arrayana y su relacin con la


floracin

En la figura 3 se presenta la informacin de la precipitacin, y los requerimientos hdricos estimados del cultivo de Arrayana desde la ltima
semana de noviembre hasta la segunda semana de marzo. En la figura se
puede apreciar que el dficit hdrico se obtuvo en la primera semana de diciembre, luego en la tercera y cuarta semana del mismo mes se contabiliz
una precipitacin de 24 mm de precipitacin. El mes de enero fue seco;
en la primera semana de febrero se contabiliz 7,5 mm de precipitacin
(sin romper el reposo de las plantas); mientras que en la ltima semana de
febrero se present una precipitacin de 28,7 mm que inici el desarrollo
de la brotacin seguida de la floracin dos semanas despus. La mandarina Arrayana present la principal floracin despus de un periodo de
estrs hdrico de 90 das, acumulando un dficit de 247 mm, durante este
periodo.

Figura 3. Requerimientos hdricos semanales de la mandarina Arrayana, precipitacin y su relacin con el comportamiento de la floracin. C.. La Libertad,
Villavicencio Meta.
Noviembre de 2002 a marzo de 2003.
Fuente: Orduz y Fischer, 2007.

/ 115 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez

Fenologa de las plantas de mandarina Arrayana en el Piedemonte del


Meta
En la figura 4 se presenta el desenvolvimiento vegetativo de las plantas
durante un ciclo anual del ao 2004, en el cultivo de mandarina Arrayana en
condiciones del C.I. La Libertad.

Las plantas presentaron brotaciones vegetativas durante un periodo de 9


meses. La menor brotacin ocurri en enero; mientras que en marzo, despus
del inicio de la temporada lluviosa, ms del 90% de las ramas evaluadas presentaron brotaciones. Durante los meses de mayo y junio no se presentaron
brotaciones y luego estas se reiniciaron en julio, agosto, septiembre y octubre
con brotaciones mensuales de 54%, 13%, 13% y 32%, respectivamente.

Figura 4. Evolucin del desarrollo de brotes y hojas en rboles


de mandarina Arrayana en el C.. La Libertad, Villavicencio, 2004.
Fuente: Orduz, et al., 2010.

Los cultivares de ctricos de mayor importancia comercial presentan una


floracin abundante. De acuerdo con Erickson y Brannaman16, se han contabilizando de 100 a 200 mil flores en un rbol adulto; sin embargo menos del
1 a 2% de estas flores llegara a fruta madura. En la figura 5, se observa como
en el 40% de las ramas evaluadas presentaron flores en la primera semana
de marzo, mientras que el porcentaje de ramas con estructuras reproductivas
decreci en las lecturas siguientes evidenciando la disminucin de estructuras
reproductivas en el transcurso del tiempo.
/ 116 /

La ecofisiologa de los ctricos en el trpico: el caso del Piedemonte Llanero de Colombia

Figura 5. Evolucin de las fases reproductivas en rboles de mandarina


Arrayana, en condiciones del Piedemonte del Meta, Villavicencio, 2004.
Fuente: Orduz, et al., 2010.

En este trabajo17 se concluy que: 1. las plantas de mandarina Arrayana


presentaron tres flujos de brotacin anual, en las pocas de marzo-abril, julioagosto y septiembre-octubre. Este comportamiento se asemeja al obtenido en
regiones subtropicales y esta relacionado con el comportamiento monomodal
de la precipitacin en el Piedemonte del Meta. 2. La principal floracin de
la mandarina Arrayana se present con la brotacin de marzo (dos a tres
semanas despus del inicio de las lluvias). Este comportamiento confirma al
estrs hdrico como el principal factor de la induccin floral en condiciones
tropicales. 3. Adems de la floracin inicial se observaron flores extemporneas durante los meses de lluvia en ausencia de estrs hdrico. Se desconoce
qu factores endgenos estn influyendo sobre la induccin floral en ausencia
de estrs hdrico.

Duracin de la floracin
En el ao 2003 se evalu la duracin del proceso de floracin, entre la
apertura de ptalos y la finalizacin de esta fase fenolgica (cada de ptalos y de estigma). La informacin se presenta en la figura 6. La duracin
de esta fase fue de 9 das en el C.I. La libertad; mientras que el mismo
proceso tard en el mediterrneo espaol alrededor de 23 das para las
primeras flores (con leves variaciones en los diferentes ciclos), entre el
15 de abril y el 7 mayo18, esto en variedades como Ellendale, Fortune y
Oronules.
/ 117 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez

El ciclo total de la floracin (de apertura de ptalos a antesis), es en promedio de 40 a 50 das en el mediterrneo espaol (1.600 u.c. acumuladas
al ao), y menos de 2 semanas en el Piedemonte del Meta (4.928 u.c.). Lo
anterior demuestra la influencia de las altas temperaturas del trpico bajo,
sobre la disminucin de la duracin de la fase de floracin de la mandarina,
y la diferencia apreciable con la duracin de la misma fase en condiciones
subtropicales.

Figura 6. Estados fenolgicos en la floracin de mandarina Arrayana en el


C.. La Libertad, Villavicencio - Meta. 2003.
Fuente: Orduz y Fischer, 2007.

Crecimiento y desarrollo del fruto de mandarina Arrayana en el Piedemonte del Meta


En la figura 7, se presenta la informacin sobre la acumulacin de peso fresco,
seco y la tasa relativa de crecimiento (gg-1 d-1) del fruto de la mandarina Arrayana.
El incremento del peso fresco del fruto es constante. El rpido aumento de peso
est relacionado con las adecuadas condiciones climticas que posee la regin para
la acumulacin de materia seca, en especial de la temperatura y de la suficiente
precipitacin en esta fase de desarrollo del fruto. La disminucin del peso fresco
en las dos ltimas lecturas puede estar relacionado con el inicio de la poca seca lo
que ocasionara un dficit hdrico durante el cual la planta puede tomar agua de
los frutos disminuyendo el peso fresco7.
/ 118 /

La ecofisiologa de los ctricos en el trpico: el caso del Piedemonte Llanero de Colombia

Figura 7. Acumulacin de materia seca (peso seco), fresca (peso fresco) y la


tasa relativa de crecimiento (gg-1 d-1) en frutos de mandarina Arrayana en
condiciones del piedemonte del Meta, a partir de la 10 semana despus de la
antesis (20 de junio a 23 de diciembre de 2003).
Fuente: Orduz, et al., 2009.

La duracin de las fases de crecimiento del fruto de la mandarina


Arrayana en las condiciones del piedemonte del Meta, fue: fase I: 5 semanas; la fase II: 5 meses; mientras que la fase III dur aproximadamente
2 meses. Los frutos pueden permanecer un mes ms en el rbol sin perder
la calidad de consumo. La tasa de crecimiento relativo del fruto tuvo un
incremento de materia seca de 0,2 g semana promedio desde semana 12
a la 16, disminuyendo a 0,1g por semana promedio hasta la semana 27
cuando disminuye a cero. El incremento del peso fresco en los ltimos 3
meses de su desarrollo fue exclusivamente por el aumento del contenido
de agua19.
Comportamiento y seleccin de cultivares de naranja en condiciones del
Piedemonte del Meta

En 1999 se establecieron 26 genotipos de naranja (variedades y selecciones


regionales), en el Centro de Investigacin La Libertad. Las plantas se injertaron sobre el patrn mandarina Cleopatra. A estos materiales se les llev
registros de crecimiento vegetativo, de produccin y calidad de los frutos a
partir del ao 2004. La informacin de la produccin anual y acumulada se
presenta en la tabla 1.
/ 119 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez

Tabla 1. Produccin anual y acumulada (Kg rbol-1). Durante cinco cosechas


de 2004 a 2008 de 26 cultivares de naranja. C.. La Libertad.
Villavicencio-Meta. rboles plantados en 1999.

2004

2005

2006

2007

2008

Produccin
Acumulada
(Kg/rbol)

Cuban Queen

39,2

55,7

20,2

3,6

26,6

145,3

Pera de Ri

4,7

42,1

53,2

8,1

23,5

131,7

Pinneaple II

16,6

25,6

27,0

6,7

38,7

114,6

Enterprise

12,6

29,1

15,9

4,4

52,2

114,1

Salerma

21,6

48,6

14,2

2,6

8,4

95,3

Naranjal Excelente

36,1

19,8

6,2

29,8

91,9

Madame Vinois

10,1

36,8

28,3

2,6

11,3

89,1

Galicia

8,6

28,0

19,5

1,8

24,0

81,8

Hamlin

3,7

20,3

28,2

5,4

21,1

78,7

Naranjal Ombligona

6,4

33,5

16,1

4,6

16,8

77,5

Palmira Ruby

10,5

44,0

8,4

4,1

10,0

77,0

Parson Brown

2,2

11,0

12,8

5,8

32,6

64,4

VN 8*

8,9

38,9

4,3

10,4

62,5

Lerma

6,1

7,4

18,4

0,0

17,4

49,4

Nativa Naranjal

5,6

3,0

11,1

4,1

19,1

42,9

Pinneaple

0,6

10,5

6,2

2,6

23,0

42,9

Rico

0,5

1,9

16,5

3,6

12,2

34,6

Salustiana

1,3

2,5

22,7

3,3

29,8

VN 7*

15,1

8,0

0,9

5,0

29,0

Garca Valencia

13,6

0,0

7,4

3,6

4,3

28,9

V. Washington II

3,5

2,1

6,7

1,4

8,7

22,5

V. Washington

3,6

3,4

2,2

9,2

Atwood navel

1,6

1,9

3,5

Moro Blood

Jaffa

Lane Late

Variedad selecciones regionales

Fuente: Orduz y Avella, 2008.

/ 120 /

La ecofisiologa de los ctricos en el trpico: el caso del Piedemonte Llanero de Colombia

De acuerdo con su produccin, los genotipos se clasificaron como: 1. Genotipos de alta produccin: Cuban Queen, Pera de Ri, Pineapple II, Enterprise y Salerma. Adems presentaron la mayor precocidad. 2. Genotipos
de producciones intermedias: Naranjal Excelente, Madame Vinois, Galicia,
Hamlin, Naranjal Ombligona, Palmira Ruby, Parson Brown y Valencia Naranjal 8. 3. Genotipos de producciones bajas: Estos cultivares fueron: Lerma,
Nativa Naranjal, Pineapple, Rico, Salustiana, VN7, Garca Valencia, Valle
Washington II, Valle Washington y Atwood Navel. Tres de los veintisis genotipos evaluados no presentaron produccin, estos son: Moro Blood, Lane
Late y Jaffa20.

Calidad de los frutos


Los frutos de los ctricos son no climatricos, por lo cul es necesario cosecharlos con las caractersticas apropiadas para su consumo21.
La calidad interna de los frutos se evalu en cada cosecha, 9 meses despus
del final de la antesis (cada de ptalos). La informacin obtenida sobre el
contenido de jugo de los genotipos evaluados se presenta en la figura 8.

Figura 8. Contenido de jugo (%). Promedio de 5 cosechas de 23 genotipos


de naranja. C.. La Libertad. Villavicencio-Meta. rboles plantados en 1999.
Frutos cosechados nueve meses despus de antesis.
Medias con error tpico.
Fuente: Orduz y Avella, 2008.

/ 121 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez

El porcentaje mnimo de jugo para la aceptacin comercial es 40 %; genotipos que no tengan frutos con esas caractersticas deben ser descartados en el
proceso de seleccin. Este es el caso de las Navel, Pinneaple, Parson Brown y
Hamlin. Algunos frutos de estas variedades pueden tener su madurez de consumo antes de los 9 meses despus de la antesis, debido a que son variedades
de cosecha temprana o intermedia en condiciones subtropicales. Las variedades con las mejores producciones deben seguir en evaluacin para determinar
el momento ptimo de cosecha y as precisar las caractersticas de calidad.

ndice de madurez
En al figura 9, se observa la relacin entre Brix y % de acido ctrico,
tambin conocida como Ratio o ndice de madurez de los frutos. Los genotipos que presentaron frutos con los valores mas bajos fueron; Salerma
(8.5), Nativa Naranjal (8.9), VN8 (9.0), Naranjal Excelente (9.6), Cuban
Queen (10.4), VN7 (10.5), Garca Valencia (10.7) y Pera de Ri (10.7).
Las variedades con valores mas altos fueron; Atwood navel (18.7), Naranjal Ombligona (23.3), Galicia (25.5), Valle Washington (25.7) y Parson
Brown (27.6)20.

Figura 9. ndice de madurez (Brix/% Acido Ctrico). Promedio de 5


cosechas de 23 genotipos de naranja. C.. La Libertad. Villavicencio-Meta.
rboles plantados en 1999. Frutos cosechados nueve meses despus de
antesis. Medias con error tpico.
Fuente: Orduz y Avella, 2008.

/ 122 /

La ecofisiologa de los ctricos en el trpico: el caso del Piedemonte Llanero de Colombia

ndice de madurez de 10 hasta 12 o 13 se consideran los mejores para


el consumo. Los genotipos que presentan un bajo ndice de madurez a los
9 meses despus de la antesis pueden tener inters para ser evaluados como
variedades tardas ya que pueden permanecer en el rbol un periodo mayor
antes de ser cosechados; mientras que los de mayores niveles de ndice de madurez como Galicia o Enterprise pueden presentar sus mejores caractersticas
de consumo entre el 7 y 8 mes lo que necesita ser evaluado para identificar
variedades tempranas que permitan ampliar la poca de cosecha en la citricultura llanera y del trpico bajo del pas.
Seleccin de variedades e hbridos comerciales de ctricos en condiciones
del Piedemonte Llanero de Colombia (2000 2009)

En el ao 2000 se estableci el ensayo para evaluar el comportamiento


de 13 variedades e hbridos comerciales de las principales especies de ctricos
en las condiciones del piedemonte llanero, con el fin de seleccionar cultivares para la futura recomendacin de nuevas variedades a los agricultores de
la regin.
A partir del ao 2004 se tom registro del crecimiento de las plantas, la
produccin y la calidad del fruto. Obteniendo los siguientes resultados:

Produccin:
Nueve de los 13 materiales evaluados inician su produccin en el ao
2004, aunque es hasta el 2005 que uno de ellos logra una produccin de
importancia comercial. Es posible que el patrn mandarina Cleopatra este relacionado con la tarda entrada en produccin, al transmitir esta caracterstica
al material sobre el cual se injerta22.
Los materiales considerados como los de mejor adaptacin a las condiciones de la regin, son los cinco que se encuentran al final de la tabla 2, los
cuales presentaron la produccin acumulada ms alta.

Calidad de los frutos


En la figura 10 se presenta el peso promedio de fruto fresco para cada
cultivar.
Por su bajo peso y tamao, unido a las bajas producciones y problemas
sanitarios (en el caso del Page), se consider que los tangelos Page y Pear,
/ 123 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez

Tabla 2. Produccin promedia anual y acumulada (Kg rbol-1) de seis


cosechas en trece cultivares de ctricos plantados en el ao 2000. C..
La Libertad. Villavicencio-Meta.
Cultivares/aos
Valencia Midknigth

2005

2006

2007

2008

1,0

18,7

36,5

14,4

20,5

7,5

98,6

12,8

26,4

8,8

44,8

10,5

103,3

17,3

31,5

27,4

23,2

1,6

104,2

1,8

10,0

37,6

49,1

28,5

127,0

Valencia Delta
Cara - Cara Navel

3,2

Tangelo Minneola

2009

Produccin
acumulada

2004

Toronja Rio Red

3,4

79,7

8,6

13,7

26,3

7,8

139,6

Tangelo Pear

14,9

3,7

57,4

17,0

43,3

10,0

146,4

Tangor Ellendale

3,2

4,8

5,5

6,2

121,6

50,0

191,2

3,7

32,2

110,4

31,1

18,2

195,6

Valencia Rhode Red


Naranja Crescent Sweet

3,3

19,3

115,1

137,4

18,8

293,9

Toronja Star Ruby

14,5

24,5

72,6

69,8

80,5

40,5

302,4

Tangelo Page

9,6

18,4

27,1

97,2

118,5

59,8

330,6

Tangelo Orlando

17,0

3,4

37,9

148,3

215,4

8,9

430,8

Mandarina Dancy

24,5

9,2

87,0

102,2

305,6

17,6

546,2

Fuente: Orduz, et al. 2010

Figura 10. Peso promedio de frutos (g) en trece variedades e hbridos


comerciales de ctricos en el C.. La Libertad. Promedio de 5 cosechas.
Villavicencio-Meta. (rboles establecidos en el ao 2000.
(Medias con error tpico).
Fuente: Orduz, et al. 2010

/ 124 /

La ecofisiologa de los ctricos en el trpico: el caso del Piedemonte Llanero de Colombia

no presentaban atributos de inters para continuar con su proceso de desarrollo como variedades en las condiciones tropicales, pues normalmente
el consumidor espera que el tangelo tenga un mayor tamao que las otras
especies ctricas.

ndice de madurez
En la figura 11, puede observarse el ndice de madurez obtenido para los
13 materiales evaluados.
Los valores clasificados como mejores para el consumo -entre 10 y 13-,
lo obtuvieron los siguientes cultivares: la Valencia Delta, los tangelos Page,
Orlando y Minneola, el tangor Ellendale y la mandarina Dancy; seguidos de
las Valencias Rhode Red y Midknight que estuvieron entre 8 y 8.4%. Ri Red
y Star Ruby presentaron los ndices ms bajos; sin embargo estos resultados
corresponden a una buena calidad de fruta para esta especie. Por ultimo las
naranjas Crescent Sweet y Cara Cara navel presentaron los mayores valores
de ndice de madurez entre 17 y 20, lo que indica que son frutas de madurez
temprana y su cosecha puede hacerse alrededor de 6 a 7 meses despus de la
cada de ptalos.

Figura 11. ndice de Madurez de trece cultivares de ctricos establecidos en el


ao 2000 en el C.. La Libertad. Villavicencio-Meta.
(Medias con error tpico).
Fuente: Orduz, et al. 2010

/ 125 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez

Finalmente por su comportamiento deficiente en las principales variables


evaluadas se descartan los cultivares de naranja Cara-Cara navel, la toronja
Ri Red, el clon evaluado de tangelo Minneola y el tangelo Pear23.

Conclusiones
t Los cultivos de ctricos en el trpico se ubican en zonas altas, medias y
bajas de acuerdo a la altura sobre el nivel del mar y su influencia sobre la
temperatura media. Estos factores climticos son importantes para la seleccin de especies y variedades a cultivar.
t La presencia o ausencia de precipitacin es el principal factor climtico que
influye sobre el crecimiento y desarrollo de las plantas de ctricos en el trpico.
t En suelos cidos de terraza alta del piedemonte del Meta una vez se ha
realizado la correccin de la acidez y la fertilizacin de forma apropiada los
principales factores que limitan el potencial de rendimiento son: el virus de
la tristeza en lima Tahit, patrones tardos en naranja Valencia, polinizacin
cruzada en tangelo Minneola y deficiencias en el cuajado del fruto en mandarina Arrayana debido a las floraciones extemporneas en la poca seca.

Agradecimientos
El autor expresa su agradecimiento a: Dr. Jaime Triana Restrepo director
del C.I. La Libertad de Corpoica en Villavicencio por su apoyo para construir
y desarrollar el programa de investigacin en ctricos y frutas tropicales en
los Llanos; al personal administrativo de CORPOICA C.I. La Libertad. A
Heberth Velsquez, Capitolino Ciprian, Alfredo Pardo, David Lpez y Melba
Mora, por el acompaamiento, y apoyo durante tantos inviernos y veranos
cuidando, cosechando y evaluando los rboles y frutos; a los estudiantes de
tesis y pasanta en las actividades de investigacin. A los financiadores, en
especial el Ministerio de Agricultura y el Fondo Nacional de Fomento Hortofrutcola; finalmente a las Ing. Agrnomas: Diana Mateus y Claudia Caldern por sus contribuciones de los ltimos aos en las actividades del programa
de investigacin de ctricos en los llanos orientales.
Referencias bibliogrficas
1. AGUST, Manuel. Citricultura. 2 ed. Barcelona: Ediciones Mundi-Prensa,
2003. 422 p.
/ 126 /

La ecofisiologa de los ctricos en el trpico: el caso del Piedemonte Llanero de Colombia

2. DAVIES, F. S. y ALBRIGO, L. G. Citrus. Wallingford, U.K.: CAB International, 1994. 254 p.


3. DAVIES, F. S. An overview of climatic effects on citrus flowering and fruit quality in various parts of the world. En: Proceedings of Citrus Flowering and Fruit
short course. University of Florida: IFAS - Citrus Research and Education Center, 1997. p. 1-4.
4. MENDEL, K., The influence of temperature and light on the vegetative development of citrus trees. En: Proceedings of the First International Citrus Symposium. 1969. 1. p. 259-265.
5. MONCADA, J.; ROS-CASTAO, D. y TORRES, R. Calidad de frutos ctricos en Colombia. En: Agricultura Tropical. 1968. Vol. 24. p. 518-526.
6. ROS-CASTAO, D. y CAMACHO, S. Ctricos. En: Frutales. Manual de
Asistencia Tcnica No. 4. Tomo 1. 2. Ed. Bogot. Instituto Colombiano Agropecuario, 1980. p 23-124.
7. ORDUZ, J. Estudios ecofisiolgicos y caracterizacin morfolgica y molecular
de la mandarina arrayana (Citrus reticulata Blanco) en el piedemonte llanero de
Colombia. Tesis doctoral. Bogot: Universidad Nacional de Colombia, 2007.
130 p.
8. SNCHEZ, L .A.; JARAMILLO, C. y TORO, J. C. Fruticultura colombianaCtricos. Manual de asistencia tcnica No. 42. Cali: ICA y SENA, 1987. 97 p.
9. FEDERACIN NACIONAL DE CAFETEROS. El cultivo de los ctricos.
Manizales: Litografa Cafetera , 1990. 28 p.
10. LYDOLPH, Paul E. The climate of the Earth. Totowa, New York, USA: Rowman and Allanheld Pub, 1985. 402 p.
11. REUTHER, W. Citrus. En: Ecophisiology of tropical crops. ALVIM, P. y KOZLOWSKI, T. (eds.). New York: Academic Press, 1977. p. 409-439.
12. SNCHEZ, L. F. y GONZLEZ, F. Una aproximacin sobre el presente y
futuro de la Orinoquia Colombiana. En: Revista SIALL. 1989. Vol. 6, No. 2.
p. 39-49.
13. ROMN, C. Limitaciones y ventajas de los suelos de los Llanos orientales para el
establecimiento de frutales. En: Suelos ecuatoriales. 1996. Vol. 26, No. 1. p. 54-61.
14. MATEUS, D.; et al. Evaluacin econmica de la produccin de ctricos cultivados en el Piedemonte del Departamento del Meta durante 12 aos. En prensa.
2010.
15. ORDUZ, J., y FISCHER, G. Balance hdrico y estudio de la influencia del
estrs hdrico en la induccin y desarrollo de la floracin de la mandarina
/ 127 /

Javier Orlando Orduz-Rodrguez

Arrayana en el piedemonte llanero. En: Agronoma Colombiana. 2007.


Vol.25, No.2. p. 255-263.
16. ERICKSON, L. C. y BRANNAMAN, B. L. Abscission of reproductive structures and leaves of orange trees. En: Proc. Amer. Soc. Hort. Sci. 1960. Vol. 75.
p. 222-229.
17. ORDUZ, J.; CASTIBLANCO, S.; CALDERN C. Y VELASQUEZ, H. Seleccin de variedades e hbridos comerciales de ctricos en condiciones del Piedemonte Llanero de Colombia (2000 2009). En prensa. 2010.
18. BONO, R.; SOLER, J. y BUJ, A. Parmetros de calidad de los ctricos: el problema de las semillas. En: Revista Comunitat Valenciana Agraria. N 16. 2000.
p. 7-15
19. ORDUZ, J.; MONROY, H.; FISCHER, G. Y HERRERA, A. Crecimiento y
desarrollo del fruto de mandarina Arrayana (Citrus reticulata) en condiciones
del piedemonte del Meta, Colombia. En: Revista Colombiana de Ciencias Hortcolas. 2009. Vol. 3, No. 2. p. 149-160
20. ORDUZ, J. y AVELLA, F. Comportamiento de 26 cultivares de naranja en
condiciones del piedemonte del Meta, Colombia. En: Revista Colombiana de
Ciencias Hortcolas. 2008. Vol. 2, No. 2. p. 157-172.
21. AGUST, Manuel. Prlogo en: Histologa y Citologa de ctricos. TADEO, F.;
MOYA, J. L., IGLESIAS, D.; TALN, M. y PRIMO-MILLO, E. Valencia,
Espaa: Generalitat Valenciana, 2003. 99 p.
22. CASTLE, W. S. Citrus rootstocks. En: ROM, R. C. y CARLSON, R. C. (eds.).
Rootstocks for fruit crops. New York: John Wiley and Sons, 1987. p. 361-369.
23. ORDUZ, J.; MONROY, H. y FISCHER, G. Comportamiento fenolgico de
la mandarina Arrayanaen el piedemonte del Meta, Colombia. En: Agronoma
Colombiana. 2010. Vol. 28, No. 1. p. 63-70.

/ 128 /

Captulo 5 / Chapter 5

nsectos de los ctricos


Guillermo Len M.*

Resumen
En Colombia los cultivos de ctricos pueden ser atacados por varias especies de insectos y caros dainos, que afectan el desarrollo de los rboles, limitan
su produccin y disminuyen la calidad de la fruta.
Los costos de las prcticas utilizadas para controlar
y evitar los daos causados por plagas, influyen en la
rentabilidad econmica de las explotaciones citrcolas comerciales.
El conocimiento de la amplia biodiversidad presente en
cultivos de ctricos, adems de la necesidad de disminuir
los costos de produccin y la exigencia de los consumidores por frutas con menos residuos de plaguicidas,
especialmente en pases importadores, han fortalecido
los estudios sobre el control biolgico y el manejo integrado de plagas (MIP) para cultivos de ctricos durante
los ltimos aos.

Candidato a doctor en Entomologa. C.. La Libertad,


Corporacin Colombiana de
nvestigacin Agropecuaria
(Corpoica).
Correspondencia:
[email protected]

La investigacin cientfica en el pas para el rea


del control de plagas debera estar orientada hacia
el aprovechamiento de la biodiversidad de especies,
buscando la reduccin del impacto en el ecosistema, en el ambiente y en la salud humana, bajo el
enfoque de manejo integrado de plagas. Se requiere
definir niveles econmicos de dao y umbrales de
/ 129 /

Guillermo Len M.

accin sobre las plagas ms limitantes en cultivos de ctricos. Es


fundamental la aplicacin de buenas prcticas agrcolas (BPAs), y
la utilizacin de productos legalmente autorizados en caso de ser
necesario el control qumico. Para ctricos con fines de exportacin,
se debern utilizar nicamente los productos qumicos autorizados
por el pas de destino y respetar los lmites mximos de residuos
(LMRs).
En este capitulo se resalta la importancia de los enemigos naturales
y se presenta adems una informacin bsica para la implementacin
de programas de manejo integrado de plagas en cultivos de ctricos,
dirigida hacia la disminucin del uso de plaguicidas, menores costos de
produccin, menor impacto ambiental y la posibilidad de obtener fruta
con tecnologas ms limpias y respetuosas del medio ambiente.
Palabras clave: ctricos, plagas, manejo integrado de plagas, Buenas
Prcticas Agrcolas.
nsects of citrus
Abstract
In Colombia citrus crops could be attacked by several species of harmful insects and mites, which affect the development and production
of trees, as well as reduce the quality of fruits. The costs of practices
to control and prevent damage caused by pests have influence in the
economic profitability of the commercial citrus farms.
Knowledge of the wide biodiversity in citrus crops, as well as the need
to reduce production costs and consumer demand for fruits with less
pesticide residues, especially in importing countries, have strengthened
research on biological control and integrated pest management (IPM)
for citrus crops in recent years.
Scientific research in the country to pest control should be directed
to the use of biodiversity of species, looking for the reduction of the
impact on the ecosystem, the environment and human health, under
the approach to integrated management pests. It is required to define
economic injury levels and thresholds for action on constraints pests in
citrus crops. Also is essential the implementation of good agricultural
practices (GAPs) and use of products legally authorized if necessary
chemical control. For exportation citrus, should only use chemicals approved by destination country and respecting maximum residue limits
(MRLs).
/ 130 /

nsectos de los ctricos

This chapter highlights the importance of natural enemies and also


presents basic information for the implementation of integrated pest
management programs in citrus crops, directed to reduce the use of
pesticides, lower production costs, reduced environmental impact and
the possibility of getting fruits with cleanest technologies and environmentally friendly.
Keywords: citrus, pests, integrated pest management, good agricultural practices

ntroduccin
Los daos producidos por las especies de insectos plagas que se presentan
en ctricos, pueden ser limitantes para la produccin de este cultivo. Debido
a la gran cantidad de insectos dainos que se presentan en el cultivo, estos
pueden atacar todos los rganos de la planta como races, troncos, ramas,
hojas y frutos, con lo cual causan disminucin de la produccin y afectan la
calidad de la fruta. Generalmente cuando se aplican prcticas de control de
plagas, los costos influyen en la viabilidad econmica de las explotaciones
citrcolas comerciales. En las dcadas anteriores, el nfasis para el control de
plagas y disminucin de sus daos se basaba en el uso de insecticidas con
amplio rango de accin; actualmente, la necesidad de disminuir los costos
de produccin, el conocimiento de la amplia biodiversidad presente en el
cultivo y la exigencia de los consumidores por frutas con menos residuos
de plaguicidas, especialmente en pases importadores, han fortalecido los
estudios sobre el control biolgico y manejo integrado de plagas en cultivos
de ctricos.
Colombia es un pas rico en biodiversidad y por ello se presenta gran
cantidad de especies dainas, pero tambin enemigos naturales depredadores, parasitoides y entomopatgenos que las controlan. En este capitulo se
resalta la importancia de los enemigos naturales y se presenta adems una
informacin bsica para la implementacin de programas de manejo integrado de plagas en el cultivo de ctricos, dirigida hacia la disminucin del
uso de plaguicidas, menores costos de produccin, menor impacto ambiental y la posibilidad de obtener fruta con tecnologas ms limpias y respetuosas del medio ambiente.
/ 131 /

Guillermo Len M.

Desarrollo del tema


fidos o pulgones (Hemiptera: Aphididae)
En cultivos de ctricos, los fidos o pulgones generalmente se consideran
plagas secundarias y espordicas, con potencial para convertirse en plagas de
importancia econmica, debido a que sus poblaciones se incrementan rpidamente. Pertenecen al orden Hemiptera, familia Aphididae, son insectos chupadores especialmente de rebrotes u hojas nuevas, pero se pueden alimentar
tambin de las yemas florales y los frutos jvenes. Altas infestaciones de fidos
producen retrasos en el desarrollo de los rboles porque las hojas se entorchan,
se deforman ligeramente y se endurecen. Algunos fidos son transmisores de
enfermedades virales; en ctricos se destaca el Toxoptera citricida por ser transmisor del virus de la tristeza1, 2.

En Colombia, se presentan casi todas las especies de fidos que pueden


causar daos en ctricos1, 3, 4. Por su alto grado de dispersin y frecuencia con
que se encuentran, los ms comunes son Toxoptera citricida, T. aurantii, Aphis
citricola y A. gossypii. Aunque se pueden encontrar durante cualquier poca del
ao, sus poblaciones se incrementan cuando la presencia de rebrotes aumenta
en los rboles y las lluvias disminuyen.
Pulgn negro de los ctricos Toxoptera aurantii (Boyer de Fonscolombe)
y Pulgn caf de los ctricos Toxoptera citricida (Kirkaldy).
Descripcin y daos

Estas dos especies son muy parecidas entre s, se sitan en el envs de


las hojas nuevas, se presentan con frecuencia afectando los terminales de
las plantas y producen entorchamiento en los rebrotes, lo cual disminuye
el desarrollo y crecimiento de los rboles (figura 1). Se consideran plagas
ocasionales, puesto que sus poblaciones se establecen en los huertos de
ctricos nicamente cuando los rboles presentan produccin de brotes
nuevos.
Adems de los ctricos, estos pulgones se reproducen y alimentan en gran
cantidad de plantas de climas medios y clidos, entre las cuales se pueden
mencionar cafeto, cacaotero, guayabo, caimo, mango y varias especies de malezas, hortalizas y ornamentales2-4.
Las ninfas de las dos especies pasan por cuatro instares de desarrollo. Recin nacidas son de coloracin rojiza a marrn verdosa clara, con patas y antenas transparentes que se oscurecen despus de corto tiempo. Los siguientes
estados ninfales se caracterizan por tener un color marrn o castao oscuro,
/ 132 /

nsectos de los ctricos

con sus cornculos y cauda oscuros casi negros. Las ninfas y hembras adultas
pueden tener alas o carecer de ellas. Las pteras, sin alas, son fidos robustos
y llegan a medir hasta 2,3 mm de longitud; su coloracin vara del marrn
oscuro al negro brillante.

Figura 1. Colonia de fidos T. citricida en botones florales y rebrotes de


ctricos. Las hormigas Camponotus sp. se alimentan de las secreciones
azucaradas y ahuyentan los enemigos naturales de los fidos.
Fotografa: G. Len.

El cuerpo de los adultos alados de T. citricida mide aproximadamente 2


mm, es negro brillante y en algunos ejemplares castao oscuro. El cuerpo de
T. aurantii es negro, a veces marrn oscuro, alcanza igual tamao que el de
T. citricida, pero sus antenas poseen el tercer segmento oscuro con su extremo
apical claro1. Entre estas dos especies, se considera de mayor importancia
el T. citricida, por ser ms frecuente, alcanzar altos niveles de infestacin y
/ 133 /

Guillermo Len M.

transmitir varios virus entre ellos el virus de la tristeza de los ctricos (CTV),
enfermedad limitante para el desarrollo citrcola de cualquier pas.
Pulgn verde de los ctricos Aphis citricola van der Goot y Pulgn del
algodonero Aphis gossypii Glover
Descripcin y daos

Estos pulgones se encuentran frecuentemente en todas las regiones clidas o


templadas de Colombia, en plantas silvestres, cultivadas, ornamentales, hortcolas y varios frutales. En ctricos se consideran plagas secundarias porque generalmente no producen daos de importancia. Pueden afectar naranjos, mandarinos, limas, limoneros y tangelos, al alimentarse de los botones florales y los
rebrotes. Forman colonias preferiblemente en el envs de las hojas nuevas y en
las ramas tiernas de los rebrotes1, 2. Se ubican en el envs de las hojas y las ramas
tiernas produciendo deformaciones y encrespamiento (figura 2). Las altas infestaciones favorecen la formacin de fumagina sobre las hojas. Cuando afectan los
botones florales causan la cada de ellos y de los frutos recin formados.

Figura 2. Colonia del pulgn Aphis gossypii, establecida


en un brote nuevo de ctricos. Fotografa: G. Len.

/ 134 /

nsectos de los ctricos

Las ninfas recin nacidas del Pulgn verde de los ctricos A. citricola son
color verde claro con antenas cortas y ojos oscuros. Pasa por cinco instares; Las
ninfas aladas tienen la cabeza, la cauda y los cornculos oscuros; las hembras
adultas llegan a medir un poco ms de 2 mm color verde amarillento a verde
claro con antenas que miden la mitad de la longitud de su cuerpo, cornculos
y cauda oscurecidos. Las hembras aladas miden cerca de 2 mm, poseen alas
transparentes y membranosas con una longitud 1,5 veces mayor que la de su
cuerpo y su color vara del verde amarillento al verde claro, con cabeza, antenas, trax y cxas, cauda y cornculos oscuros1.
El pulgn del algodonero A. gossypi, es muy parecido al A. citricola y se pueden confundir. El A. gossypi mide 1,8 mm, color verde amarillento a verde oscuro. Las ninfas poseen antenas de color blanco amarillento con sus dos primeros
segmentos ennegrecidos; patas de color amarillo con tibias oscuras en sus pices
y tarsos negros. Cornculos negros y cauda verde oscura a negra. Las hembras
aladas poseen antenas negras con segmentos intermedios ms claros. Alas con el
estigma amarillento a pardo. Cabeza y trax negro, abdomen verde con manchas
laterales, cornculos verdes oscurecidos casi negros y cauda verde o amarilla oscura; patas amarillentas con tarsos y extremos de las tibias oscurecidas1.
Control natural y recomendaciones de manejo para fidos o pulgones
Las poblaciones de fidos son reguladas por gran cantidad de insectos benficos parasitoides y depredadores que contribuyen a disminuir los niveles
poblacionales y ejercen un eficiente control natural. Los fidos se pueden encontrar tambin afectados por hongos entomopatgenos como Entomophtora sp. el cual infecta adultos y ninfas de la plaga3, 5.

Entre los parasitoides ms frecuentes de los pulgones de los ctricos, est


Lysiphlebus testaceipes (Cresson) (Hymenoptera: Braconidae) (figura 3), una
pequea avispa negra que puede llegar a parasitar grandes cantidades de individuos dentro de cada colonia y alcanza porcentajes de parasitismo superiores
al 70% en condiciones naturales3, 5, 6.
Existen numerosas especies de moscas y mosquitos del orden Diptera depredadores de fidos, entre las cuales sobresalen el Aphidoletes sp., varias
especies de la familia Syrphidae como Syrphus sp., Baccha sp. y otras especies que en estado larval se alimentan de fidos. Tambin se destacan por su
importancia numerosas especies de cucarroncitos o mariquitas de la familia
Coccinellidae como Cicloneda sanguinea, Scymnus sp., Hyperaspis sp., Cryptognatha sp., Pentilia castanea y Cryptolaemus sp.3, 5.
/ 135 /

Guillermo Len M.

Figura 3. zquierda: Una avispa parasitoide Lysiphlebus testaceipes coloca


sus huevos dentro de una ninfa del fido Toxoptera citricida. Derecha: fidos
parasitados por L. testaceipes. Toman un aspecto globoso, momificado y
coloracin marrn claro u oscuro brillante. Se observan los orificios de salida
del parasitoide. Fotografas: G. Len.

Otros depredadores muy importantes de los pulgones son Chrysoperla carnea y C. septempunctata (Neuroptera: Chrysopidae) denominadas comnmente
crisopas (figura 4), las cuales se alimentan frecuentemente de las colonias de la
plaga5. Asimismo se deben mencionar otros depredadores como son araas, caros y pequeos chinches de la familia Miridae y Anthocoridae que contribuyen
a regular las poblaciones de los pulgones en los huertos de ctricos.
El manejo de los fidos en plantaciones de ctricos se basa en monitoreos y
revisiones peridicas de los huertos para determinar la presencia, el establecimiento y el nivel poblacional de la plaga. Durante las pocas de produccin de
brotes nuevos, las revisiones se deben intensificar. Los fidos pueden establecerse en forma generalizada o focalizada dentro de los huertos. Para cualquiera
de las dos situaciones es necesario demarcar y hacer visibles los sitos donde la
plaga est efectuando el dao, labor que puede ser realizada colocando tiras
plsticas de color en las ramas de los rboles afectados.
No se recomienda realizar aplicaciones de insecticidas en forma generalizada dentro de los huertos. El control qumico se debe aplicar de forma
localizada, es decir dirigido hacia los sitios donde se encuentra la plaga6. Los
insecticidas de accin sistmica y los especficos para el control de fidos pueden ser utilizados ocasionalmente y son recomendables si se utilizan en forma
racional; entre los insecticidas selectivos se pueden mencionar: abamectinas,
pirimicarb y algunos sistmicos como dimetoato, tiometon y fosfamidon.
/ 136 /

nsectos de los ctricos

Cualquiera de ellos en todos los casos debe ser aplicado en forma dirigida hacia las ramas, sitios y focos en donde se encuentran los fidos. Las aplicaciones
de aceites agrcolas, jabones y extractos de plantas, son una buena alternativa
de manejo y deben ser aplicados en forma dirigida, buscando la mejor cobertura y el contacto de los productos con la plaga.

Figura 4. Colonia de fidos T. citricida afectando terminales de ctricos. La


flecha indica una larva de Crisopa, la cual es un depredador eficiente de fidos
y varias plagas en ctricos. Fotografa: G. Len.

El control de hormigas, es una prctica complementaria que ayuda a regular las poblaciones de pulgones porque evitan la accin protectora que las
hormigas ejercen sobre sus colonias, mientras se alimentan de las secreciones
azucaradas que estos producen.
Moscas blancas (Hemiptera: Aleyrodidae)
Las moscas blancas son pequeos insectos que a pesar de su nombre no son
realmente moscas. Son insectos chupadores del orden Hemiptera que pasan por
los estados de huevo, ninfa y adulto. Las ninfas y los adultos causan los daos a las
plantas al extraer la sabia de las hojas. Las especies ms comunes que afectan los
ctricos pertenecen a la familia Aleyrodidae y se encuentran distribuidas en todas las
regiones agrcolas del pas. Dentro de esta familia se pueden destacar Aleurothrixus
/ 137 /

Guillermo Len M.

floccosus, Paraleyrodes citri, Parabemisia sp., Aleurocanthus woglumi, Aleuronudus sp. y


Dialeurodes spp., por ser las ms frecuentes en cultivos de ctricos4, 7.
Se pueden considerar plagas potenciales y de importancia econmica secundaria, puesto que se presentan espordicamente causando leves daos a
las plantaciones. Sin embargo cuando alcanzan altos niveles poblacionales,
ocasionan daos de importancia en los ctricos. Pueden atacar todas las variedades, sin mostrar preferencia por especies o variedades cultivadas de
ctricos. El principal dao que causan las moscas blancas es la extraccin de
savia de las hojas, lo cual debilita la brotacin y disminuye la produccin7, 8.
Las ninfas y adultos de las moscas blancas producen sustancias azucaradas
cuando se alimentan de las plantas; estos melados afectan la fotosntesis de
las plantas y disminuyen la calidad de los frutos al favorecer el crecimiento de
fumagina sobre las ramas, hojas y frutos.
Mosca blanca algodonosa de los ctricos Aleurothrixus floccosus
(Maskell)
Descripcin y Daos

El cuerpo de los adultos de Aleurothrixus floccosus es de color amarillo con


1,5 mm de longitud, con dos pares de alas de 2 mm recubiertas con un polvillo
color blanco. Poseen patas y antenas visibles y aparato bucal picador chupador
con el cual extraen la sabia de las plantas. Viven cerca de 18 a 20 das8.
El patrn de postura de los huevos puede ser til para la identificacin
de las especies de mosca blanca en el campo. Aleurothrixus floccosus coloca
sus huevos dispuestos en forma de crculo preferiblemente en el envs de las
hojas, son ovalados, castaos a amarillos y los recubre ligeramente con un
polvillo blanco ceroso (figura 5).
Las ninfas son color verde claro traslcidas y a medida que se desarrollan se
tornan castao oscuro; su forma es elptica y en sus ltimos estados ninfales produce filamentos de cera blanca que forman una maraa que recubre y protege
totalmente el cuerpo; poseen aparato bucal chupador apropiado para extraer sabia
de las plantas y un orificio anal por el cual eliminan excrementos lquidos con
abundante melado que atrae las hormigas; estas a su vez, interfieren con el control
natural al alejar a las avispas parsitas y algunos pequeos insectos depredadores.
Las secreciones de mielecilla colectan polvo y ayudan al crecimiento del
hongo carbonoso Capnodium sp., el cual favorece la formacin de fumagina
que reduce la fotosntesis y contribuye a causar defoliaciones severas.
/ 138 /

nsectos de los ctricos

Figura 5. Colonia de ninfas de la mosca blanca lanuda Aleurothrixus floccosus


en el envs de la hojas. Logran recubrir las hojas totalmente.
Fotografa: G. Len.

Otras especies de moscas blancas


Descripcin y daos

Hay varias especies de moscas blancas que afectan los ctricos como la
mosca negra de los ctricos Aleurocanthus woglumi Ashby, Aleuronudus sp.,
la mosca blanca de los ctricos Dialeurodes citri Ashmead y la mosca blanca
Paraleyrodes citri Bondar.
Los adultos de estas moscas se localizan en el envs de las hojas y frecuentemente
se asocian con otras especies de insectos como escamas, cochinillas u otras moscas
blancas. Colocan sus posturas en el envs de las hojas y protegen sus huevos con
cera. Las ninfas son ovaladas y aplanadas; recin nacidas son mviles de color blanco amarillento y posteriormente se fijan a los tejidos de la planta, empiezan a extraer la sabia de las plantas y producen cera para recubrirse. La secrecin de sustancias azucaradas estas moscas, no es tan copiosa como la producida por A. floccosus
y por lo tanto el desarrollo de fumagina es mayor cuando se presenta esta ltima.
Control natural y recomendaciones de manejo para moscas blancas
Existe gran cantidad de enemigos naturales de las moscas blancas, que regulan los niveles de poblacin y disminuyen el dao causado por ellas en los
cultivos de ctricos. El hongo entomopatgeno Aschersonia aleyrodis Webber infecta con frecuencia ninfas de mosca blanca y crece dentro y encima del cuerpo
del insecto. Las ninfas afectadas por el hongo toman una coloracin naranjada y
posteriormente se momifican. Cuando el hongo ataca es capaz de causar epizootias, es decir que puede infectar totalmente las poblaciones de la plaga.
/ 139 /

Guillermo Len M.

Entre los parasitoides, se han encontrado varias especies de diminutas


avispitas que realizan un importante control natural de moscas blancas, e
inclusive son utilizadas en programas de control biolgico. Entre ellas se pueden mencionar Encarsia aleurothrixi Evans & Polaszek, E. citrella (Howard),
E. luteola Howard y E. basicincta Gahan (Aphelinidae); Aleuroctonus vittatus
(Dozier) (Eulophidae) y Amitus spiniferus (Brthes) (Platygastridae). Tambin
se encuentran frecuentemente hiperparasitoides de la familia Signiphoridae,
entre ellas Signiphora aleyrodis Ashmead, S. xanthographa Blanchard y Signiphora sp. (grupo flavopalliata)9.
Segn University of California10, Erectmocerus sp., Amitus sp. y varias especies de Encarsia sp., son los enemigos naturales que ms frecuentemente
parasitan ninfas de mosca blanca y son muy importantes porque han sido
utilizados con buenos resultados en programas de control biolgico de estas
plagas en cultivos e ctricos en varios pases del mundo.
Existe gran cantidad de insectos depredadores de moscas blancas. Los ms
frecuentes son varias especies de cucarroncitos o mariquitas de la familia Coccinellidae como Cryptolaemus sp., Cryptognata sp., Nephaspis sp., Olla plagiata
Casey, Pentilia castanea Mulsant, Scymnus sp., y Zagreus sp. entre otros, que en
estado larval o adulto consumen ninfas de la plaga (figura 6)5, 6. Adems, existen pequeas moscas ladronas de la familia Asilidae depredadoras de adultos
de la plaga. El control qumico tiene los mismos fundamentos explicados para
el manejo de insectos chupadores como los fidos, trps y algunas escamas
protegidas.

Figura 6. Coccinlidos Nephaspis sp. Son pequeos cucarroncitos (2 mm)


depredadores importantes de ninfas de mosca blanca.
Fotografa: G. Len.
/ 140 /

nsectos de los ctricos

Trips (Thysanoptera: Thripidae)


Los trps (Thysanoptera: Thripidae), son pequeos insectos de tamao
aproximado a 1 mm. Poseen aparato bucal chupador, adaptado para extraer
los contenidos de las clulas vegetales y producen heridas especialmente en los
frutos que al cicatrizarse desmejoran su presentacin. Generalmente no son
plaga de importancia econmica, pero ocasionalmente cuando la poblacin
es numerosa, pueden deteriorar la calidad de los frutos. Por lo general se encuentran distribuidos en todas las zonas del trpico y subtrpico del mundo.
Se presentan en gran cantidad de plantas cultivadas, malezas, frutales y ornamentales.

En ctricos se registran varias especies como Heliothrips spp., Scirtothrips citri,


Selenothrips spp. y Frankliniella spp. De acuerdo a varias publicaciones existen
diferentes especies de Frankliniella que causan daos en frutos de ctricos11. En
Colombia la especie ms frecuente es el trips del invernadero Heliothrips haemorrhoidalis que causa daos de consideracin en naranjas, limas y tangelos; tambin
se presenta ocasionalmente el trps de los ctricos Scirtothrips citri.
Trip del invernadero Heliothrips haemorrhoidalis (Bouch) y Trip de los
ctricos Scirtothrips citri (Moulton)
Descripcin y daos

El trp Heliothrips haemorrhoidalis (Bouch) es conocido como trip de los


invernaderos y afecta varios cultivos hortcolas como tomate, berenjena, habichuela, frjol; flores como rosas, orqudeas, lirios, begonias y frutales diversos
como guayabo, mango y ctricos entre otros12. Se encuentra distribuido por
todas las regiones productoras de ctricos y afecta naranjas, tangelos y lima
acida Tahit, con menor incidencia sobre mandarina arrayana.
El macho de esta especie es desconocido, pues la hembra coloca y fecunda
sus huevos por s misma. La hembra al completar su desarrollo puede medir
hasta 1,7 mm de largo por 0,5 mm de ancho. Cada hembra produce en
promedio 25 huevos que son colocados individualmente en los lugares ms
frescos de las plantas, cerca de los rebrotes o botones florales. El ciclo vida de
este insecto se cumple entre 30 y 45 das promedio, dependiendo de la temperatura y humedad del ambiente.
Se alimenta de hojas nuevas, yemas, flores o frutos en formacin, aunque
tambin puede afectar frutos en estados de desarrollo avanzados. El H. haemorrhoidalis causa un color blanco plateado en los sitios de alimentacin, debido
/ 141 /

Guillermo Len M.

a que las paredes celulares heridas por la plaga se llenan de aire para conservar
su forma y tamao original; las yemas y las flores afectadas no se abren normalmente y ataques sobre las hojas producen acartonamiento inicial, seguido
de secamiento y defoliacin. El dao principal lo causa cuando afecta directamente los frutos, pues en ellos se forman cicatrices y agrietamientos caractersticos en las reas de la cscara donde se ha alimentado la plaga, lo cual
desmejora la apariencia y calidad externa de la fruta.
El trp de los ctricos, Scirtothrips citri, est reportado en las principales regiones productoras de ctricos en el mundo. Presenta color amarillo a naranja
plido, con ojos rojos; tiene una longitud aproximada de 18 mm, su cuerpo es
alargado y posee dos pares de alas traslcidas provistas de flecos. Las hembras
son ms grandes que los machos, pueden producir huevos sin aparearse, pero
en este caso la progenie ser de solo machos. El desarrollo de huevo a adulto
requiere de un mes en climas moderados, pero se acorta a un poco ms de dos
semanas en climas clidos.
Prefieren alimentarse de tejidos nuevos de la planta como rebrotes y frutos
pequeos. Los primeros instares larvales viven debajo de los spalos de los frutos jvenes; los rebrotes afectados no se logran desarrollar normalmente. Los
frutos afectados adquieren un aspecto corchoso en su base y cicatrices como
costras en la epidermis del fruto sobre los sitios de alimentacin de la plaga, lo
cual desmejora notablemente su calidad.
Control natural y recomendaciones de manejo para Trips
Los principales enemigos naturales son los caros depredadores de la familia Phytoseiidae, entre los cuales se destaca por su frecuencia Amblyseius sp.
y Euseius sp. Tambin existen trips depredadores que contribuyen a disminuir los niveles poblacionales de la plaga y es frecuente el chinche depredador
Orius sp., de la familia Anthocoridae. La avispa parasitoide Ceranisus sp. es
uno de los principales controladores naturales de trips11, 13.

An cuando causa problemas de desarrollo en el fruto y forma reas corchosas alrededor del pecolo y en diferentes partes del fruto, el trps del invernadero H. haemorrhoidalis y el trips de los ctricos, S. citri, no son causantes
de graves prdidas econmicas para los cultivadores de ctricos y debe tenerse
en cuenta el tipo de comercializacin que se le dar a la fruta antes de tomar
decisiones de control.
Si las condiciones de calidad para el mercado de la fruta lo establecen, en
caso de ser necesario emplear control qumico, se deben utilizar nicamente
/ 142 /

nsectos de los ctricos

productos selectivos como los aceites agrcolas, sales de potasio, extractos de


plantas con pegantes y jabones. Aunque la mayora de las veces no llegan a ser
necesarios, se podran utilizar adems en forma racional y localizada productos
de rpida degradacin, baja toxicidad y poco dainos para el equilibrio ambiental como cartap, abamectina, imidacloprid, dimetoato o clorpyrifos entre otros.
Picudos de los ctricos
Generalidades, descripcin y daos

Los picudos de los ctricos son considerados plagas de importancia econmica para el cultivo en varios pases productores. La literatura internacional,
registra daos de importancia econmica causados por estos picudos de la
familia Curculionidae especialmente en la regin citrcola de Florida U.S.A.,
en donde se hallan descritas ocho especies de picudos diferentes, de las cuales
cinco de ellas (Pachnaeus litus (Germar), P. opalus Schoenherr, Asynonychus
godmani Crotch, Artipus floridanus Horn y Diaprepes abbreviatus Linnaeus)
son considerados plagas primarias, debido a los daos causados por las larvas en las races de los rboles14. El picudo D. abbreviatus, es considerado el
ms daino de todos especialmente en el estado de La Florida, en donde se
considera una plaga de gran importancia para los cultivos de ctricos15. Cabe
destacar que ninguna de estas especies ha sido reportada en Colombia.
En nuestro pas se conocen varias especies de picudos asociados a este cultivo registradas desde el ao 1939, pero no se haba manifestado su importancia
como plaga hasta el ao 1995, cuando se detectaron altas infestaciones en
los Departamentos de Quindo, Caldas, Valle, Tolima, Antioquia y Risaralda que causaron daos de consideracin en algunas plantaciones de la zona
central cafetera. El agente causal determinado en estas regiones inicialmente
se registr como Paracompsus sp., luego como Compsus viridilineatus Jeckel y
finalmente fue identificado como Compsus sp16, 17.
Recientemente, OBrien y Pea (2012), redescribieron dos especies de picudos del genero Compsus Schoenherr (Coleoptera: Curculionidae: Entiminae)
colectadas en cultivos de ctricos de Colombia. De acuerdo a dichas descripciones taxonmicas, los picudos Compsus que se presentan con mayor frecuencia en los cultivos de ctricos de nuestro pas, corresponden a las especies
C. obliquatus Hustache y C. viridivittatus (Gurin-Mneville)18.
En Colombia, hay varias especies de picudos de los ctricos, tambin denominados vaquitas, que pueden causar daos al follaje y a las races de los
rboles de ctricos. Entre las variadas especies de picudos que se asocian a los
/ 143 /

Guillermo Len M.

ctricos, Compsus spp., son las ms frecuentes e importantes, pero hay otras
especies como Eustilus bodkini Marshall y Macrostylus sp., que se pueden considerar como plagas potenciales porque aparecen cclicamente y se establecen
en los huertos de ctricos (figura 7). Todas estas especies pertenecientes al
orden Coleoptera, familia Curculionidae.

Figura 7. Picudos de los ctricos. zquierda: Compsus viridivittatus (GurinMneville). Derecha: Eustylus bodrini Marshall. Longitud aproximada 1 cm.
Fotografas: G. Len.

La mayora de los picudos que se asocian a los ctricos, tienen hbitos y


ciclos de vida similares y casi todas estas especies son univoltinas o sea que
tienen una generacin por ao. La duracin de los huevos es de 10 a 20 das
en promedio y las larvas pueden vivir durante 7 a 18 meses. Cuando nacen
las larvas, inmediatamente se dirigen o se dejan caer hacia el suelo para alimentarse de las races de los rboles y causar su dao al consumir el tejido
externo de la corteza. Las larvas rodean la raz y pueden causar la muerte de
los rboles jvenes19. Adicionalmente a este dao directo, la alimentacin
de las larvas de los picudos favorece la entrada de enfermedades y patgenos
del suelo, particularmente Phytophthora spp. que causa gomosis y pudriciones de la raz.
Los adultos emergen del suelo, buscan sus plantas hospederas, viven en
ellas durante varios meses. Estudios de CENICAFE19 corroboran que estos
picudos son polfagos porque tienen gran cantidad de hospederos entre los
cuales se mencionan algodn, sorgo, caf, man, frjol, pltano, banano, yuca,
aguacate, mango, guayaba, veraneras, gusimo, matarratn, palmas y varias
malezas adems de los ctricos. En cultivos de ctricos prefieren las partes som/ 144 /

nsectos de los ctricos

breadas de los rboles y se alimentan de las hojas jvenes; en horas soleadas


buscan los rebrotes frescos, se alimentan de ellos, copulan y colocan sus huevos entre las hojas jvenes pegndolas entre s.
El dao causado por los picudos en estado adulto, se reconoce por la presencia de pequeos cortes en las mrgenes de las hojas. Este tipo de dao
nunca llega a ser de importancia econmica para la produccin de ctricos.
En los Llanos Orientales se ha observado que la aparicin de los adultos de
picudos de la raz se presenta en diferentes pocas para cada una de las especies presentes en la regin. Los adultos de Compsus sp., comienzan a aparecer
en los lotes de ctricos durante el mes de Septiembre y permanecen por ms
de seis meses en niveles poblacionales estables. E. bodrini y Macrostylus sp.
inician su aparicin con las lluvias de marzo y permanecen en poblaciones
altas hasta el mes de julio, cuando empiezan a disminuir sus poblaciones para
mantenerse en bajos niveles hasta finales del ao20.
Recomendaciones de manejo para picudos de los ctricos
La prevencin y erradicacin es la mejor arma para evitar ataques de picudos en lotes que van a ser sembrados con ctricos. Para ello se requiere de una
inspeccin cuidadosa del suelo para determinar si hay presentes o no larvas
o adultos de picudos. Un buen mantenimiento del huerto es esencial para el
manejo en caso de estar presentes los picudos. Un buen drenaje, adecuada
fertilizacin e irrigacin, favorecen el crecimiento de las races y disminuyen
el riesgo de enfermedades y muerte de los rboles.

La mejor manera para determinar la presencia de picudos en el campo, es


examinar los terminales en busca de los cortes tpicos en las mrgenes de las
hojas, causado por la alimentacin de los adultos. Debido al hbito nocturno de los adultos, las mejores horas para localizarlos son bien de maana o
avanzada la tarde, cuando se localizan en las partes exteriores del follaje de los
rboles.
Para facilitar su deteccin y para el monitoreo de adultos, se agitan las
ramas y los picudos caen fcilmente al suelo; para poder establecer el nivel de
poblacin, se colocan cartones o telas debajo de los rboles y all caern los
picudos, que en esta forma podrn ser contabilizados con mayor facilidad.
No existe informacin precisa acerca de los niveles de dao econmico para este tipo de plagas, por ello para tomar decisiones de control
de picudos se deben tener en cuenta varios factores como la edad de los
/ 145 /

Guillermo Len M.

rboles, puesto que los rboles jvenes tienen un sistema de races menos
desarrollado y son ms susceptibles al dao. La resistencia de los patrones
al dao de Phytophthora spp. es otro factor que debe ser considerado y
aqu el drenaje del huerto juega un papel fundamental. Los suelos pesados
con pobre drenaje aumentan la susceptibilidad a la enfermedad de los patrones moderadamente resistentes como Mandarina Cleopatra y Citrange
Carrizo.
El control de adultos mediante el uso de insecticidas no es recomendable
puesto que el dao causado no es econmicamente representativo y ms
bien se pueden afectar organismos benficos con este tipo de aplicaciones,
comprometiendo el control natural de otros insectos dainos. Una alternativa factible para el control de adultos que busca reducir principalmente
el nmero de hembras dentro de la plantacin para evitar que coloquen
huevos y en esta forma disminuir la futura infestacin, es el uso de hongos
entomopatgenos como el Beauveria bassiana y el Metarhizium anisopliae
(figura 8). Esta prctica se debe realizar 2 a 3 semanas despus de la aparicin de los adultos en el campo y luego de un control de malezas especialmente en las zonas de plateo, que obligue a los picudos a refugiarse en el
follaje de los rboles.

Figura 8. Picudo de los ctricos: E. bodrini afectado


por el entomopatgeno Beauveria bassiana.
Fotografa: G. Len.

/ 146 /

nsectos de los ctricos

Existen enemigos naturales de Compsus sp. que estn siendo estudiados


para su uso como control biolgico do la plaga con excelentes resultados,
como el caso de Gonalezia gloriosa, (Hymenoptera: Encirtidae) una microavispa que parasita huevos del picudo Compsus sp. hasta en 80%21. Otro
ejemplo es Trigonospila sp. (Diptera: Tachinidae), una mosquita que ha sido
encontrada parasitando adultos de estos picudos en el Departamento de Caldas, con una eficiencia hasta de 75% de control22. Por los resultados de estos
trabajos, los autores concluyen que dichos agentes de control biolgico deben
ser incluidos en los programas de manejo integrado de la plaga.
Comedores de follaje
En ctricos se presentan ocasionalmente varios comedores de follaje del
orden Lepidoptera, como los gusanos perrito: Papilio anchisiades Esper, P.
thoas Linnaeus (Lepidoptera: Papilionidae); los tortrcidos: Platynota spp.
(Lepidoptera: Tortricidae); el gusano amarillo: Halisidota sp. (Lepidoptera:
Arctiidae) y el gusano platanillo: Panoquina spp. (Lepidoptera: Hesperiidae),
pero sus daos nicamente llegan a ser de importancia econmica en plantaciones jvenes y en viveros con manejo agronmico inadecuado (Figura 9).
Tambin se pueden presentar cucarroncitos del follaje: Epitrix sp., Cerotoma
sp. y Diabrotica spp. (Coleoptera: Chrysomelidae) los cuales ocasionalmente
se alimentan de las hojas de los ctricos.

Figura 9. zquierda: Mariposas adultas del gusano perrito de los naranjos.


Superior: Papilio anchisiades, inferior: Papilio thoas. Derecha: Larvas del
gusano perrito P. anchisiades. Se alimentan de las hojas de los ctricos y
viven en forma gregaria.
Fotografas: G. Len.

/ 147 /

Guillermo Len M.

En plantaciones comerciales de ctricos mayores de cuatro aos, este tipo


de plagas no representan peligro para la produccin, puesto que son ocasionales, con un consumo bajo de follaje que generalmente no afecta los rendimientos ni la calidad de la fruta.
En ctricos se pueden destacar dos especies de gusano perrito de los naranjos P. anchisiades y P. thoas. Los adultos de P. anchisiades son mariposas con
aproximadamente 9 cm de longitud de expansin alar, color caf oscuro con
tres manchas rosadas en sus alas. Los adultos de P. thoas son mariposas de 10
cm de expansin alar, color negro con manchas amarillas; sus alas posteriores
presentan hermosas colas. Las larvas son de hbitos gregarios, se localizan
durante el da agrupadas en la base de los troncos de los rboles y durante
la noche se desplazan en fila india hacia la parte superior de los rboles para
alimentarse de las hojas.
Otros gusanos comunes en las plantaciones de ctricos son los de la familia
Tortricidae, que como el Platynota spp., causan raspaduras, producen esqueletizacin de las hojas y pegan el follaje entre s con sus secreciones y excrementos; otros como el gusano peludo amarillo Halisidota sp. causan daos de
menor importancia a los rebrotes, aunque prefieren los botones florales, las
flores y los frutos recin formados de los ctricos.
Varias especies de gusanos platanillo como los Panoquina spp. y algunos
gusanos cabezones como Brasolis sp., se presentan haciendo daos de importancia secundaria al ocasionar cortes tpicos de media luna y habitar en
los bordes de las hojas jvenes. Los gusanos canasta como Oiketicus kirbyi
(Guild.), los gusanos cachones como Erinnyis ello (L.) y algunos gusanos tabaquitos son espordicos en ctricos y solo en caso de presentarse incrementos
poblacionales incontrolados podran causar daos econmicos.
Entre los cucarrones comedores de follaje, los crisomlidos se presentan con
alguna frecuencia sin llegar a ser plagas de importancia econmica. En este grupo
se podran mencionar las pulguillas Epitrix sp. y los cucarroncitos del follaje Cerotoma sp. y Diabrotica spp. entre otros, como los ms frecuentes en citricultura.
Control natural y recomendaciones de manejo para comedores de follaje

El control natural de los gusanos comedores de follaje en ctricos es muy


amplio y en condiciones naturales evita que estas plagas logren causar prdidas de importancia para la produccin. Los principales enemigos naturales de
los comedores de follaje son los pjaros, las araas y los insectos depredadores.
/ 148 /

nsectos de los ctricos

Entre los insectos depredadores ms eficientes se encuentran las avispas


Polistes y Polibia. Estas avispas son capaces de consumir gran cantidad de
larvas diariamente. Otros consumidores importantes de larvas comedoras de
follaje estn representados por varias especies de chinches depredadores del
orden Hemiptera (Reduviidae, Pentatomidae), Neuroptera (Mantispidae) y
cucarrones de las familias Carabidae, Cicindelidae e Histeridae. Las araas
que viven en los rboles de ctricos se alimentan con larvas del minador y
con larvas comedoras de follaje, contribuyendo de esta forma con el control
natural de estas plagas23.
Los insectos parasitoides juegan un papel importante en la regulacin de
las poblaciones de larvas comedoras de follaje al parasitar huevos y larvas de
estas plagas. Entre los parasitoides de huevos el Trichogramma spp., (Hymenoptera: Trichogrammatidae) y varias especies de Telenomus spp., (Hymenoptera: Scelionidae) en condiciones naturales son los ms frecuentes y alcanzan
altos niveles de parasitismo sobre estas posturas. Existen tambin varias especies parasitoides que afectan las larvas de los comedores de follaje entre las
cuales se destacan Apanteles sp. (Braconidae), Copidosoma sp. (Encyrtidae) y
varias especies de moscas de las familias Tachinidae y Sarcophagidae.
Entre las enfermedades que atacan las larvas de lepidpteros, estn los virus de la granulosis y la poliedrosis nuclear, las bacterias Serratia spp. y Bacillus
thuringiensis que afectan gran cantidad de estas larvas comedoras de follaje, especialmente cuando sus hbitos son gregarios como en el caso de los gusanos
perrito. Los hongos entomopatgenos como Metharizium anisopliae, Nomuraea
rileyi, Paecilomyces sp. y Beauveria bassiana son otro factor de mortalidad que se
presenta en el campo y afecta gran parte de las poblaciones de estas plagas.
Bajo las condiciones naturales en que se desarrolla la citricultura del pas
y teniendo en cuenta la amplia gama de factores de mortalidad por enemigos
naturales de estas plagas, no es necesario realizar prcticas de control qumico
para ningn comedor de follaje. Sin embargo, se pueden presentar casos aislados y fuera de lo normal, por lo cual se recomienda monitorear permanentemente los cultivos para detectar oportunamente cualquier infestacin.
En caso de presentarse infestaciones de estas plagas en los cultivos, es conveniente utilizar insecticidas selectivos para el control de comedores de follaje,
como son los insecticidas inhibidores de la sntesis de quitina, los simuladores
de la formacin de ecdisona, las abamectinas y los insecticidas biolgicos como
el Bacillus thuringiensis. Estos productos ofrecen alta eficacia de control y por su
alto grado de selectividad no afectan significativamente la fauna benfica.
/ 149 /

Guillermo Len M.

Minador de los ctricos Phyllocnistis citrella Stainton (Lepidoptera:


Gracillariidae)
Generalidades, descripcin y daos

El minador de los ctricos Phyllocnistis citrella ha sido considerado como una


de las plagas de mayor importancia para los ctricos en el mundo24. En Colombia su presencia fue registrada durante el mes de marzo de 1995 en la zona central cafetera y actualmente se encuentra diseminada en todas las reas citrcolas
del pas25. En el Meta el insecto fue reportado en 1995 afectando cultivos de
mandarina Cleopatra, tangelo Minneola, lima Tahit y naranja Valencia26.
El adulto de P. citrella es una pequea mariposa, de 3 mm de longitud,
color crema con alas plateadas iridiscentes, bandas grisceas y un punto oscuro en el extremo posterior (figura 10). Sus alas anteriores son plumosas y
recubren todo el cuerpo. Son activas durante el atardecer y prefieren las hojas
nuevas para colocar sus huevos. Una hembra puede colocar hasta 70 huevos
de 2 mm de dimetro que se confunden con pequeas gotas de roco27.

Figura 10. Adulto del minador de los ctricos Phyllocnistis citrella.


Fotografia: G. Len.

Las larvas de P. citrella pasan por cuatro estados de desarrollo y causan


el dao al introducirse entre la epidermis de las hojas y ramas jvenes para
alimentarse del tejido parenquimtico, hasta formar minas o galeras que posteriormente producen entorchamientos y resecamientos prematuros en el follaje atacado (figura 11).
/ 150 /

nsectos de los ctricos

Figura 11. zquierda: Hojas con larvas y dao de minador de los ctricos
Phyllocnistis citrella. Derecha: Hojas terminales o rebrotes de ctricos con
dao tpico causado por el minador P. citrella.
Fotografas: G. Len

Aunque el minador de los ctricos puede encontrarse en plantas ornamentales, en algunas malezas y tambin en bejucos y leguminosas que se encuentren entrelazados con el follaje de los ctricos, prefiere como plantas hospederas todas las variedades de ctricos y afecta pomelos, toronjas, naranjos,
mandarinos, tangelos, limas y limones25.
Control natural y recomendaciones de manejo para el minador de los
ctricos
Los enemigos naturales del minador de los ctricos principalmente parasitoides de larvas y pupas, han sido reconocidos en los pases productores porque
controlan buen porcentaje de la poblacin28. En la regin citrcola de Florida
causan mortalidad del 50% de la poblacin del minador29. En Espaa se citan
once especies de parasitoides y registran 17% de parasitismo por Galeopsomyia
fausta LaSalle, parasitoide importado de Nicaragua y Colombia27, 30.

En Colombia, existen varias especies diferentes de parasitoides de larvas y


pupas del minador pertenecientes al orden Hymenoptera, familia Eulophidae.
Entre ellas, Galeopsomyia fausta (figuras 12 y 13), Closterocerus sp., Elasmus tischeriae Howard, Horismenus sp., Zagrammosoma sp., tres especies de Cirrospilus
y Allobracon sp., y una avispa Braconidae, subfamilia Horminae. Estos parasitoides se presentan en las plantaciones de ctricos y contribuyen con el control de la
plaga, al regular las poblaciones del minador, lo cual disminuye la importancia y
los daos causados por esta plaga a los ctricos en el pas25, 26.
/ 151 /

Guillermo Len M.

Figura 12. Avispita benfica Galeopsomyia fausta parasitando una larva del
minador de los ctricos Phyllocnistis citrella.
Fotografa: G. Len.

Figura 13. Minador de los ctricos Phyllocnistis citrella parasitado por


Galeopsomyia fausta. La flecha seala el parasitoide en estado de pupa
porque ya ha salido de la larva del minador.
Fotografa: G. Len.

Adems de los parasitoides del minador, en las plantaciones de ctricos,


frecuentemente se presentan muchos enemigos naturales que controlan sus
poblaciones. Se pueden mencionar varias especies de depredadores de larvas
del minador, como las araas de las familias Lycosidae, Salticidae u Oxiopidae; hormigas depredadoras de los gneros Crematogaster y Ectatomma;
crisopas, y varias avispas de los gneros Polistes y Polibia (figura 14). Expertos
de varios pases26-30, coinciden en que el minador debe ser considerado plaga
de importancia econmica solamente en viveros, plantaciones menores de
/ 152 /

nsectos de los ctricos

4 aos y rboles reinjertados, puesto que prdidas del 30% del follaje de las
nuevas brotaciones, no afectan la floracin ni la produccin en rboles adultos. Se debe determinar la infestacin de minador por medio de monitoreos
peridicos y el control qumico nicamente se realiza si ms del 30% de las
hojas nuevas presenta minas activas.

Figura 14. Avispa benfica depredadora Polibia sp.,


alimentndose de larvas de minador de los ctricos.
Fotografa: G. Len

Teniendo en cuenta la amplia gama de factores de mortalidad causada por


enemigos naturales de esta plaga, no es necesario realizar control qumico para
el minador de los ctricos en plantaciones de ms de dos aos; sin embargo,
se pueden presentar casos aislados. Para estos casos y cuando se presentan
ataques del minador en plantaciones jvenes, que se encuentran en establecimiento, se podran aplicar insecticidas selectivos como los inhibidores de
la sntesis de quitina, los simuladores de la formacin de ecdisona, las abamectinas los insecticidas biolgicos como el Bacillus thuringiensis e inclusive
productos selectivos como Imidacloprid que ha proporcionado excelentes resultados de control20.
Hormigas (Hymenoptera: Formicidae)
Generalidades y recomendaciones de manejo

En Colombia existen gran cantidad especies de hormigas que pueden ser


dainas a todos los cultivos establecidos por el hombre. Para los cultivos de
/ 153 /

Guillermo Len M.

ctricos, las ms importantes y frecuentes son las hormigas arrieras Acromyrmex lundii Gurin-Mneville, Atta laevigata F. Smith y A. columbica GurinMneville, por su gran capacidad de defoliacin.
Las hormigas de los gneros Atta y Acromyrmex se denominan hormigas
arrieras, porque efectan cortes semicirculares en las hojas hasta defoliar completamente las plantas atacadas. Son de importancia en ctricos, forestales,
potreros, caa de azcar y muchos otros cultivos. En citricultura representan
una grave amenaza y ocasionan prdidas severas especialmente para los huertos o plantaciones en establecimiento, por su gran capacidad de cortar hojas,
pueden causar hasta la muerte de los rboles cuando las defoliaciones son
severas y sucesivas.
Adems de las hormigas arrieras en cultivos de ctricos se observan frecuentemente varias especies de hormigas como Camponotus sp., Ectatomma
sp., Crematogaster sp. y Dolichoderus bidens Linnaeus entre otras, las cuales
aunque no defolian los rboles, causan efectos negativos al alimentarse de las
secreciones azucaradas producidas por fidos, moscas blancas, escamas y otros
insectos chupadores, puesto que con su presencia interrumpen, perturban y
ahuyentan a los parasitoides o depredadores que realizan el control natural de
estos insectos; dicho efecto secundario hace que las poblaciones de plagas ocasionales o de escasa importancia econmica, se incrementen por insuficiencia
de enemigos naturales20, 23.
Actualmente existen varios mtodos tcnicos y prcticos para el control de
hormigas en los cultivos de ctricos, entre los cuales se destacan las prcticas
culturales y el control qumico mediante el uso de insecticidas aplicados directamente dentro de los hormigueros o la utilizacin de cebos txicos.
El control qumico a pesar de las restricciones, es un mtodo prctico, la
mayora de las veces eficiente para el control de hormigas. Debe ser utilizado en forma tcnica, lo cual implica la aplicacin dirigida desde la boca de
los hormigueros hacia su interior, buscando que el insecticida penetre hasta
todas las cmaras del hormiguero. Las dimensiones de los hormigueros de
algunas hormigas arrieras del gnero Atta, pueden alcanzar tamaos descomunales; por ejemplo, los nidos de Atta laevigata alcanzan profundidades
de 7 m y tienen alrededor de 8000 cmaras en su interior, por lo cual es
muy difcil que los insecticidas penetren en la totalidad de las cmaras y
los productos insuflados se dispersen por todo el hormiguero, hacindose
necesaria la utilizacin de mtodos complementarios para lograr un control ms eficaz.
/ 154 /

nsectos de los ctricos

Los cebos txicos son prcticos, eficientes y econmicos para el control


de hormigas. Pueden ser utilizados en rotacin con el control qumico y son
un excelente complemento de este. Los cebos son formulados en forma de
pequeas pastillas o pellets que deben ser colocados cerca de los caminos
o los nidos de las hormigas para que ellas los transporten y los distribuyan
en el interior de su hormiguero. El sustrato atrayente ms empleado en los
cebos es la pulpa de naranja deshidratada y los productos utilizados para
este tipo de cebos son la sulfluramida (Mirex), el fipronil (Blitz) y el clorpirifos31. Estos actan por ingestin, son inodoros, no repelen a las hormigas
y son letales en bajas concentraciones. Una vez el producto se encuentra
dentro del hormiguero, contamina las obreras y en las arrieras inhibe el crecimiento del hongo de la colonia, produciendo mortalidad en porcentajes
que superan el 90%.
El uso de pegantes y repelentes aplicados en forma de barreras alrededor
de los troncos de los rboles para evitar que las hormigas trepen a ellos es una
prctica muy eficiente (figura 15). Es recomendable hacer revisiones semanales de las bandas aplicadas como barrera en los troncos, para verificar si el
pegante o el cebo han perdido su eficacia y en dado caso impregnarlas nuevamente con el producto o repetir el tratamiento. Otro mtodo prctico de
control localizado que contribuye al manejo de las hormigas, es el uso de insecticidas diluidos en agua azucarada o miel de purga, aplicados alrededor de
los troncos, lo cual acta como cebo envenenado y repelente para no permitir
el acceso de las hormigas hacia las copas de los rboles. Las llamadas ruanas
de cartn o cartulina impermeabilizada colocadas alrededor de los trocos en
plantas jvenes, son tambin muy eficaces para el control de estas hormigas.
Termitas o Comejnes (Blattodea)
Generalidades y recomendaciones de manejo

Las termitas o comejenes, son insectos de 0,5 a 1,0 cm de longitud, cuerpo blando usualmente color blanco, con alas color oscuro ms largas que el
cuerpo, las cuales se desprenden luego de que los individuos reproductores se
han apareado. Son habitantes naturales del suelo y la madera es su alimento
preferido; forman colonias en el suelo, las maderas blandas y tambin en otros
materiales en descomposicin. Tienen organizacin social con castas de diferenciacin entre trabajadores, reproductores, soldados y reinas.
Las especies dainas ms frecuentes en cultivos de ctricos, son Amitermes
sp. de la familia Termitidae, Heterotermes sp. y Reticulitermes sp. de la familia
/ 155 /

Guillermo Len M.

Rhinotermitidae los cuales pertenecen al Orden Blattodea. Por su naturaleza, estas especies se alimentan de madera y juegan un importante papel en
el ciclo de la descomposicin de esta, por el aporte de materia orgnica que
realizan a los suelos durante el proceso6, 20.

Figura 15. Aplicacin de barreras en los troncos para impedir el acceso de


las hormigas a la parte superior de los rboles. Se pueden utilizar bandas
de plstico impregnadas con pegante para atrapar insectos, o bandas de
melaza con insecticida.
Fotografa: G. Len.

Generalmente los daos de termitas se presentan en plantaciones menores


a dos aos. Usualmente atacan debajo y alrededor del tronco, en las races
secundarias consumiendo la corteza. Las termitas atacan en cualquier poca
del ao, pero sus efectos se intensifican en pocas secas cuando los niveles de
humedad del suelo descienden. A consecuencia del dao, el rbol sufre un
/ 156 /

nsectos de los ctricos

rpido declino inicialmente, manifestado por la perdida del color en las hojas
de las ramas afectadas o en la totalidad del follaje; posteriormente ocurre una
defoliacin severa hasta que el rbol muere. El dao causado por el comejn
a los ctricos tiene adems efectos secundarios, puesto que favorece la entrada
de patgenos del suelo, especialmente el hongo Phytophthora spp. que causa
comnmente podredumbres de la raz y la gomosis de los ctricos.
El control de comejn debe ser preferiblemente preventivo y una estrategia
consiste en remover todos los residuos de madera o de otros rboles dentro del
lote de siembra antes del establecimiento del cultivo o si existen estos materiales
en una plantacin ya sembrada, deben ser retirados. Se deben efectuar revisiones
peridicamente para asegurar si los rboles que presentan sntomas del dao
tienen la presencia de la plaga en las races o el tronco. Un mtodo de monitoreo
eficiente, es ubicar trampas atrayentes o cebos, que pueden ser troncos o estacas de madera blanda cerca de los rboles o en los lotes infestados. Estas trampas
debern ser revisadas cada quince das en busca de termitas o comejn. En caso
de registrarse la presencia de la plaga en las trampas se requiere efectuar control.
Una vez detectada la plaga en los troncos o races de los rboles, se debe
efectuar control qumico dirigido. Son recomendables insecticidas como el
clorpirifos, hexaflumuron o Fipronil31, los cuales aplicados en la base de los
rboles y en la zona de plateo pueden dar proteccin por dos a tres meses
contra la plaga; su aplicacin puede ser repetida si los monitoreos indican
nuevamente la presencia de la plaga.

Conclusiones y Recomendaciones
La investigacin cientfica en el pas en el rea de entomologa debe de
estar orientada al aprovechamiento de la biodiversidad nacional buscando la
reduccin del impacto en el ecosistema, el ambiente y en la salud humana,
bajo un enfoque holstico y de manejo integrado de plagas.
En cada regin productora de ctricos se deben definir las plagas de mayor
importancia econmica para el cultivo, debido a que las dinmicas poblacionales de los insectos dainos y sus enemigos naturales, son diferentes en cada
regin, por lo tanto es posible que una especie sea plaga de importancia en
una regin y en otra no afectar al cultivo.
Se debe realizar estudios sobre mtodos de muestreo y patrones de distribucin de las plagas en cultivos, para definir niveles econmicos de dao y
umbrales de accin sobre las plagas de mayor importancia.
/ 157 /

Guillermo Len M.

Un buen mantenimiento del huerto es necesario para establecer programas


de manejo integrado de las plagas (MIP). La mayora de las veces, un buen
programa MIP no recomienda realizar aplicaciones de insecticidas en forma
generalizada dentro de los huertos, ya que es posible efectuar control qumico
de forma localizada, es decir dirigido hacia los sitios donde se encuentra la plaga.
Se recomienda utilizar insecticidas selectivos, de baja toxicidad para que no
afecten significativamente la fauna benfica. Los insecticidas de accin sistmica y los de amplio espectro para el control de plagas, pueden ser utilizados
ocasionalmente y son recomendables si se utilizan en forma racional.
En el caso de cultivos para exportacin se deben utilizar nicamente los
productos autorizados para tratamientos en campo por el pas de destino y los
limites mximos de residuos (LMRs). Es fundamental la aplicacin de BPAs,
y el desarrollo por parte del ICA de listas de productos autorizados para aplicacin en campo.
Es muy importante el monitoreo de plagas y las revisiones peridicas de los
huertos para determinar la presencia, establecimiento y el nivel poblacional
de las plagas. Los registros obtenidos se podran incluir en un sistema de informacin disponible en pginas web, para proporcionar informacin diaria y
alertas del estado de las plagas ms limitantes a los productores.
En Colombia es necesaria la creacin de biofbricas o laboratorios de control biolgico certificados, que produzcan y suministren con buena calidad
entomopatgenos y enemigos naturales de las plagas ms limitantes, para ser
utilizados en programas MIP por los productores.
Referencias Bibliogrficas
1. BUSTILLO, A. y SNCHEZ, G. Los fidos en Colombia, plagas que afectan
los cultivos agrcolas de importancia econmica. Bogot: ICA COLCIENCIAS, 1977. 6 p.
2. LLORENS, C.J. Hemiptera II. Pulgones de los ctricos y su control biolgico.
Valencia. Espaa: Ediciones Pisa, 1990. 170 p.
3. VELEZ, A. R. Plagas agrcolas de impacto econmico en Colombia: Bionom a
y manejo integrado. Medelln. Colombia: Editorial Universidad de Antioquia,
1997. 482 p.
4. POSADA, L. Lista de insectos dainos y otras plagas en Colombia. Boletn tcnico. 1989. No. 43. I.C.A. Bogot, Colombia. 662 p.
/ 158 /

nsectos de los ctricos

5. INSTITUTO COLOMBIANO AGROPECUARIO - I.C.A. Lista de predadores, parsitos y patgenos de insectos registrados en Colombia. Boletn tcnico.
1976. No. 41. Bogot Julio de 1976. 90 p.
6. ANDREWS, K. y QUEZADA, J. Manejo integrado de plagas insectiles en la
agricultura. Estado actual y futuro. Departamento de proteccin Vegetal. Escuela agrcola Panamericana. Honduras: El Zamorano, 1989. 623 p.
7. PRATT, R. M. Gua de Florida sobre insectos, enfermedades y trastornos de la
nutricin en frutos de ctricos. 6 Ed. Mexico. D.F.: Editorial Limusa, 1987.
198 p.
8. NASCA, A.; et al. Animales perjudiciales y benficos a los ctricos en el Noroeste
Argentino. Centro de Investigaciones sobre regulaciones de poblaciones de organismos nocivos. Tucumn, Argentina: CIRPON, 1981. 351 p.
9. LEN, M. G.; EVANS, G. A. y CAMPOS, J. C. Parasitoides de plagas
(Homoptera) de los ctricos en el Departamento del Meta, Colombia. En:
Revista Colombiana de Entomologa SOCOLEN. 1999. Vol. 25, No 3-4,
p. 143 146
10. UNIVERSITY OF CALIFORNIA. Natural Enemies Handbook. The illustrated guide to Biological Pest Control. Statewide Integrated Pest Manegement
Project. Publication 3386. California: University of California - Division of
Agriculture and Natural Resources, 1998. 154 p.
11. ________. Integrated Pest Management for Citrus. Statewide Integrated Pest
Manegement project. Publication 3303. California: University of California Division of Agriculture and Natural Resources, 1984. 144 p.
12. QUINTANILLA, R. H. Trips, caractersticas morfolgicas y biolgicas. Especies de mayor importancia agrcola. Buenos Aires, Argentina: Editorial Hemisferio Sur, 1980. 60 p.
13. FLINT, M.L. y DREISTAD S.H. Natural enemies handbook. The illustrated
guide to biological pest control. Statewide integrated past management project.
Publication 3386. California: University of California, 1998. 154 p.
14. WOODRUFF, R. E. Citrus weevils in Florida and the West Indies: Preliminary
report on systematics, biology and distribution (Coleoptera: Curculionidae).
En: Florida Entomologist. 1985. Vol. 68, No. 3. p. 370379.
15. STUART, R.; et al. Lady beetles as potential predators of the root weevil Diaprepes abbreviatus (Coleoptera: Curculionidae) in Florida citrus. En: Florida Entomologist.2002. Vol. 85, No. 3. p. 409-416.
16. INSTITUTO COLOMBIANO AGROPECUARIO, ICA. Manejo del picudo
de los Ctricos. Boletn de Sanidad Vegetal. 2002. p. 33: 1-27.
/ 159 /

Guillermo Len M.

17. CANO, D.; et al. Biologa y enemigos nativos del picudo de los ctricos Compsus
n. sp. (Coleoptera: Curculionidae). En: Revista Colombiana de Entomologa.
2002. Vol. 28, No. 1. p. 43-52
18. OBRIEN C. W.; PEA, J. 2012. Two species of Compsus Schoenherr, new
citrus pests from Colombia (Coleoptera: Curculionidae: Entiminae). Insecta
Mundi: 0227: 1 13.
19. CANO, D. Biologa, comportamiento y enemigos nativos del picudo de los
ctricos Compsus sp. en la zona central cafetera. En: Memorias del seminario
nacional sobre el picudo de los ctricos. Asocitricos-Cenicafe-ICA. Pereira. 2000.
17 p.
20. LEN, M.G. Insectos de los ctricos. Gua ilustrada de plagas y benficos con
tcnicas para el manejo de los insectos dainos. Ed. Bogot: Produmedios,
2001. 81 p.
21. ESTRADA, G.; SOTO, A. y PALACINO, J. Efecto de liberaciones de Gonalezia gloriosa (Hymenoptera:Encyrtiidae) sobre posturas de Compsus sp. en condiciones de campo. En: Resmenes 38 Congreso SOCOLEN, Manizales, 2011.
p. 105
22. SOTO, A. Parasitismo de Trigonospila sp. (Diptera: Tachinidae) sobre adultos
del picudo de los ctricos Compsus sp. en condiciones de campo. En: Resmenes
38 Congreso SOCOLEN, Manizales, 2011. p. 38
23. LEN, M. G. La diversidad de insectos en ctricos y su importancia en los programas de manejo integrado de plagas. En: Revista Manejo Integrado de Plagas
y Agroecologa. Turrialba, Costa Rica. 2005. Vol. 74, p. 85 - 93
24. MORAKOTE, Y. y UJIYE, T. Parasitoids of the citrus leafminer, Phyllocnistis
citrella Stainton in Thailand. En: Japanese Journal of Applied Entomology and
Zoology. 1992. Vol. 36, No 4. p. 253 255.
25. CASTAO, P.O. El minador de las hojas de los ctricos (Phyllocnistis citrella,
Stainton). En: Memorias III Foro de sanidad vegetal Nuevos problemas fitosanitarios en Colombia. Universidad Nacional de Colombia. Departamento de
Agronoma. Marzo de 1996. p. 75-103.
26. LEN, M. G. y CAMPOS, J. C. Parasitoides del minador de los ctricos Phyllocnistis citrella (Lepidoptera: Gracillaridae) en el Piedemonte del Departamento del Meta. En: Revista de Colombiana de Entomologa SOCOLEN. 2001.
Vol. 27, No. 3 y 4 p. 143-146.
27. LLACER, E.; et al. Introduccin de Galeopsomyia fausta, ectoparasitoide de pupas del minador de las hojas de los ctricos. En: Revista internacional de ctricos
Levante Agrcola. Espaa. 1998. Vol. 37, No. 343. p. 159 -167.
/ 160 /

nsectos de los ctricos

28. ARGOV, Y. y ROSSLER, Y. Introduction, release and recovery of several exotic


natural enemies for biological control of the citrus leafminer, Phyllocnistis citrella
in Israel. En: Phytoparasitica. 1996. Vol. 24, No. 1. p. 33-38.
29. PEA, J. E.; DUNCAN, R. y BROWNING, H. Seasonal abundance of Phyllocnistis citrella (Lepidoptera:Gracillariidae) and its parasitoids in South Florida
citrus. En: Environmental Entomology. 1996. Vol. 25, No.3 p. 698 702.
30. JACAS, J. A. El minador de las hojas de los ctricos: situacin actual. En: Revista
internacional de ctricos Levante Agrcola. Espaa. 1998. Vol. 37, No. 343. p.
157-159.
31. SUBBA, R. B. y RAMAMANI, S. Biology of Cirrospiloideus phyllocnistoides
(Narayanan) and description of a new species, Scotolinx quadristriata (Hymenoptera: Eulophiidae) as parasites of Phyllocnistis citrella Stainton. En: Indian
Journal Entomology. 1965. Vol. 27, p. 408 413.
32. KNAPP, J. L. Florida citrus pest management guide. Florida: University of Florida. Cooperative Extension Service. 1998. 76 p.

/ 161 /

/ 162 /

Captulo 6 / Chapter 6

caros que afectan la calidad


del fruto de los ctricos en Colombia
Nora Cristina Mesa Cobo*
Isaura Viviana Rodrguez Torres **

Resumen
En el presente documento se hace una revisin de
algunos aspectos generales de las especies de caros
ms importantes que atacan el cultivo de ctricos en
la regin suroccidental de Colombia, y se presentan
algunos resultados de investigaciones recientes sobre
el problema, adems de una clave para identificar las
principales familias que afectan el cultivo.
Palabras clave: ctricos, familias de caros, control
biolgico.

Ph. D. Entomologa, profesora asociada Universidad


Nacional de Colombia, Sede
Palmira.
Correspondencia:
[email protected]

** Candidata a doctorado en
Ciencias Agropecuarias,
linea Proteccin de Cultivos, Universidad Nacional
de Colombia, sede Palmira.
Correspondencia:
[email protected];
[email protected].

Mites that affect the fruits quality


in Colombian citrus
Abstract
In this document, a revision to some general aspects
of the most important mite species that attack citrus
crops in the South East of Colombia is made, and
some results from recent research works on the subject
are shown, along with a key to identify the main mite
families that affect those crops.
Key words: Citrus, mite families, biological control.
/ 163 /

Nora Cristina Mesa Cobo, saura Viviana Rodrguez Torres

ntroduccin
La citricultura del suroccidente colombiano, representada por los departamentos de Valle, Quindo, Risaralda, Caldas y Antioquia, cuenta con poca
asistencia tcnica calificada, y se caracteriza por hacer un manejo tradicional
del cultivo con la aplicacin de acaricidas sin tener en cuenta niveles de infestacin, uso casi exclusivo de compuestos qumicos, mnimo uso de alternativas de control biolgico, poca asistencia tcnica, entre otros aspectos, lo cual
est en contrava con la poltica colombiana de Proteccin a la Produccin
Agropecuaria, que busca incrementar y garantizar una produccin competitiva, que cumpla con los requisitos sanitarios de calidad e inocuidad, establecidos por la Organizacin Mundial del Comercio (OMC), para acceder a los
diversos mercados externos1.
Los caros son identificados como uno de los problemas fitosanitarios
que causan importantes disminuciones en la calidad del fruto de naranja
Valencia en el pas, efecto que se expresa en que entre el 37 y el 40% del
rea del fruto presenta dao cosmtico al momento de la cosecha. Estudios
recientes confirman que las familias de caros ms importantes por su impacto econmico son: Tarsonemidae, Tetranychidae, Eriophyidae y Tenuipalpidae, adems de caros benficos de las familias Phytoseiidae, Bdellidae,
Cunaxidae, Stigmaeidae, Cheyletidae y algunos cuyo rol no est bien definido, como Tydeidae, Oribatida, Acaridae, Winterschmidtiidae y Suidasidae.
La regin suroccidental presenta caractersticas climticas especiales como
precipitaciones intensas, humedad relativa alta, bajas temperaturas en la noche y altas en el da, condiciones que favorecen la presencia de enfermedades
en flores y frutos2.

Generalidades de algunas familias importantes presentes en los


ctricos
La familia Tarsonemidae sobresale por su frecuencia y abundancia Polyphagotarsonemus latus (Banks) en todas las zonas productoras de la zona suroccidental del pas, donde ocasiona prdidas por momificacin de frutos jvenes
hasta 2 meses de desarrollo, y en otros casos, cuando el fruto contina su
desarrollo, causa cicatrices y malformaciones. De esta familia tambin se encuentran, en follaje y frutos, especies de los gneros Daidalotarsonemus sp.,
Fungitarsonemus sp., Xenotarsonemus sp., Tarsonemus sp. y Phytonemus sp.3 Algunos de estos gneros llevan adheridos a su cuerpo, y en estructuras especializadas, esporas de hongos patgenos, que diseminan enfermedades fungosas4.
/ 164 /

caros que afectan la calidad del fruto de los ctricos en Colombia

Dentro de los Eriophyidae, Phyllocoptruta oleivora Ashmead es la nica especie de esta familia asociada al cultivo que ocasiona daos significativos en
frutos en el pas5-8. De la familia Tenuipalpidae, el gnero Brevipalpus contiene
las especies de mayor importancia econmica en ctricos. Brevipalpus phoenicis
(Geijskes), en el pas se presenta con alta frecuencia sobre hojas, ramas y especialmente frutos, a pesar de las altas precipitaciones. Esta especie es el vector del
virus de la enfermedad conocida como leprosis de los ctricos. En Colombia se
han reportado sobre ctricos las especies B. phoenicis y B. obovatus Donnadieu5-9.
B. phoenicis fue reportada en el ao 2004 en los departamentos de Casanare y
Meta, asociada con la presencia de la leprosis10. El ciclo de vida de este caro es
de 37.4 a 43.2 das sobre frutos y hojas de naranja Valencia, respectivamente11.
Varias especies de Tetranychidae son considerados importantes plagas en ctricos, Panonychus citri (McGregor), de distribucin cosmopolita y con amplia gama
de hospederos del gnero Citrus; Eutetranychus banksi (McGregor) y Tetranychus
urticae Koch3, 5-7. En colectas de caros en ctricos en la costa norte de Colombia,
se reporta a Schizotetranychus hindustanicus (Hirst), especie considerada de importancia cuarentenaria para el cultivo; se colect por primera vez en la localidad de
Dibulla (Guajira) y recientemente el ICA la encontr en cultivos de naranja en
Magdalena12. Esta especie fue reportada en Zulia, Venezuela, en el 2002, y causa
ataques severos donde las hojas afectadas pierden el color y los frutos se tornan
plateados y duros13, tambin se reporta su presencia en Roraima, Brasil14.
Asociadas a ctricos se encuentran tambin algunas familias de caros como
Acaridae, Saproglyphidae, Tydeidae, Oribatidae, Winterschmidtiidae y Suidasidae, los cuales presentan hbitos fungvoros y saprfagos; por tanto, no ocasionan
daos en frutos o follaje, ya que se alimentan de secreciones, exuvias, cadveres
de insectos y hongos, entre otros15. En 1998 se registr la presencia de Oulenzia
sp. yTyrophagus sp. asociados a cultivos de ctricos en el Valle del Cauca7. Otro
grupo importante por su abundancia son los caros de la familia Tydeidae, los
cuales se presentan en grandes colonias sobre rboles frutales y plantas ornamentales, en diferentes localidades de Colombia. Las poblaciones de estos caros se
congregan en la base de las ramas, pecolos y en diferentes reas donde producen
esclerotizacin del tejido verde seguido por descamacin de las zonas donde se
concentran16. La mayora de las especies de Tydeidae son frugvoras, pero colonias densas, presentes en todos los estados de desarrollo, producen manchas
sobre el tejido de las plantas17; no obstante, se ha demostrado que en huertos
de ctricos el control de las poblaciones de Lorrya formosa Cooreman favorece el
aumento de la escama Saissetia oleae (Oliver)15, 18. En el pas se ha reportado la
presencia de L. formosa, L. turrialbensis Baker, y Parapronematus citri Baker 2, 7.
/ 165 /

Nora Cristina Mesa Cobo, saura Viviana Rodrguez Torres

Caractersticas de algunas especies de caros asociados a ctricos


Polyphagotarsonemus latus Banks (Acari: Tarsonemidae)
El caro blanco, P. latus, es una de las especies de mayor importancia econmica en todo el mundo16, 19. Esta especie presenta amplia distribucin geogrfica y tiene ms de 60 familias de plantas hospederas19, 20. Durante su desarrollo pasa por los estados de huevo, larva, pupa y adulto; la pupa corresponde
a una fase inmvil; en naranja Valencia el ciclo de vida es de 3.1 das (mnimo
2.75 y mximo 4.74 das)21; este valor es similar a los reportados por diversos
autores sobre otros hospederos 22, 23. La alimentacin del P. latus causa una
variedad de sntomas en diferentes hospederos y una variedad de reacciones
especficas por efecto de la posible toxina que inyecta principalmente en las
regiones de crecimiento de la planta, donde los tejidos son trgidos, ya que
sus estiletes quelicerales son muy cortos16. Infesta las hojas nuevas de los brotes, las cuales se decoloran, presentan plateamiento o bronceado del envs, se
vuelven estrechas y rgidas lo que ocasiona daos severos y deformaciones; de
ah pasa a los frutos recin formados, y atrofia su crecimiento hasta la momificacin y deformacin de los mismos24. El dao en los frutos se caracteriza por
el levantamiento de la capa superficial de la epidermis, la cual queda adherida
como una pelcula fina de coloracin gris plateada a la superficie del fruto, y
es fcilmente removible25. El dao causado por P. latus en frutos de lima en La
Florida ocurre entre 4 y 6 das despus de la infestacin, y el dao severo en la
epidermis aparece a los 12 das26. Estudios recientes sobre naranja Valencia en
Colombia demuestran que infestaciones de 30 hembras sobre frutos tiernos
inducen primeras manifestaciones de dao a los 2.4 das, y posterior cada
de la estructura en una semana27, 28. En Colombia, P. latus se reproduce en el
campo durante todo el ao. El incremento de las poblaciones del caro se asocia con algunos factores climticos como temperatura y precipitacin, aunque
zonas como Caicedonia (Valle) que tienen humedades relativas superiores al
80% presentan picos poblacionales del caro durante todo el ao28.

Phyllocoptruta oleivora (Ashmead) (Acari: Eriophyidae)


En Colombia el caro tostador P. oleivora es la nica especie de Eriophyidae que causa daos de importancia econmica en ctricos, especialmente en naranja5- 8, 12. A pesar de la importancia que tiene P. oleivora
en la produccin de ctricos en Colombia, no existan reportes sobre la
magnitud del dao ocasionado teniendo en cuenta el tamao tan reducido
de estos caros y la dificultad para observarlos; tampoco se conocan estu/ 166 /

caros que afectan la calidad del fruto de los ctricos en Colombia

dios bsicos sobre la biologa de este caro en el pas. Estudios de ciclo de


vida desarrollados sobre naranja Valencia en Colombia confirmaron que
P. oleivora pasa por los estados de huevo, larva, ninfa y adulto; la ninfa es
ligeramente de mayor tamao; los estados inmaduros, as como el adulto,
poseen dos pares de patas situadas en el propodosoma; la forma de estos
caros es vermiforme o fusiforme; el ciclo de vida es de 7.4 das (mnimo
5, mximo 8.6 das)21, 29 valor similar al reportado por diversos autores30,
31
. El dao ocasionado por este caro se produce por la insercin de los
estiletes quelicerales, los cuales alcanzan las clulas epidrmicas; el dao
resulta de la extraccin del contenido celular que ocasiona bronceamiento en hojas y frutos; las clulas perforadas cicatrizan por la presencia de
lignina24. Otra teora afirma que el caro rompe clulas de aceite de la
epidermis de los frutos de naranja; estas clulas perforadas se colapsan
modificando su color; la alimentacin del caro induce una produccin de
etileno (C2H4) que estimula el cambio de color en hojas y frutos; el dao
tambin parece estar asociado a la produccin de lignina en el proceso de
cicatrizacin y a una probable oxidacin de sustancias del citoplasma de
las clulas de la epidermis32. En estudios recientes desarrollados sobre cultivos de naranja Valencia en Caicedonia (Valle) y Tmesis (Antioquia), el
caro nunca se encontr sobre hojas tiernas ni en frutos menores a cuatro
meses de desarrollo; los picos de poblacin de la especie se presentaron
durante las pocas de verano y no se encontr correlacin entre el dao
de P. oleivora y parmetros de calidad de los frutos afectados como peso,
dimetro y grados brix; los primeros sntomas de dao que aparecen sobre
frutos de cuatro a seis meses de edad (3-7 cm de dimetro) ocurren entre
28 y 38 das con niveles de infestacin entre 100 y 500 adultos por fruto;
la aparicin del bronceamiento de los frutos fue significativamente ms rpida en frutos de cuatro meses (3-5 cm de dimetro) infestados con 300500 adultos, los cuales mostraron dao en su epidermis a los 37 das28.

Controladores biolgicos de los caros fitfagos en ctricos


Entre los enemigos naturales de caros fitfagos en ctricos se destacan los
caros de la familia Phytoseiidae, por su abundancia y frecuencia en el follaje.
En Colombia, estos caros son reconocidos como reguladores biolgicos en
diferentes agroecosistemas8. En ctricos se han identificado: Amblyseius aerialis
(Muma), A. coffeae De Leon, A. chiapensis De Leon, A. herbicolus (Chant),
A.vasiformis Moraes y Mesa, Amblyseius sp., Euseius concordis (Chant), E. ala/ 167 /

Nora Cristina Mesa Cobo, saura Viviana Rodrguez Torres

tus De Leon, Euseius sp., E. caseariae De Leon, E. ho De Leon, E. naindaimei


(Chant y Baker), Iphiseiodes zuluagai Denmark y Muma, Neoseiulus anonymus Denmark y Muma, N. californicus (McGregor), Proprioseiopsis cannaensis
(Muma), Typhlodromalus aripo De Leon, Typhlodromipsneotunus Denmark y
Muma, Typhlodromina tropica (Chant), Typhlodromus transvalensis (Nesbitt)
3,5,6,7
. Adems de los Phytoseiidae, se encontraron representantes de otras familias con hbitos depredadores como Cunaxidae, Bdellidae, Cheyletidae,
Stigmaeidae y Tydeidae2.

Conclusiones y recomendaciones
Se espera que los resultados presentados en esta seccin permitan a los citricultores del pas conocer algunos aspectos bsicos sobre el comportamiento
y los daos que causan las especies de caros de mayor importancia en el cultivo, y contribuyan a mejorar la sanidad del cultivo, con lo cual se fortalece la
cadena citrcola en el pas. No obstante, es necesario continuar con estudios
sobre el establecimiento de mtodos de muestreo secuencial y patrones de
distribucin de los caros en cultivos, de una manera similar a los desarrollados en otras regiones del mundo33,34. Esta informacin es de gran valor en
el momento de establecer umbrales de accin como los desarrollados para P.
oleivora en Australia25, Estados Unidos31y Brasil35 as como tambin para P.
latus en Australia y Florida35.
Referencias bibliogrficas
1. ESPINAL, Carlos F.; MARTINEZ, Hctor J. y PEA, Yadira. La cadena de
ctricos en Colombia una mirada global de su estructura y dinmica 1991-2005.
Bogot: Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural - Observatorio Agrocadenas Colombia, 2005. 61 p.
2. MESA, Nora Cristina; et al. Caracterizacin del manejo de los ctricos en la zona
sur occidental de Colombia. Especies de caros asociadas a cultivos de naranja
Valencia. Cali, Colombia: Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural y Universidad Nacional de Colombia Sede Palmira, 2011. 16 p.
3. MESA, Nora Cristina, et al. Especies de caros asociados a naranja Valencia en el
Valle del Cauca, Quindo, Caldas, Risaralda y Antioquia. En: XXXVI Congreso
de la Sociedad Colombiana de Entomologa, 29 a 31 de Julio de 2009 Medelln.
p.193.
4. OCHOA, Ronald; AGUILAR, Hugo y VARGAS, Carlos. caros fitfagos de
Amrica Central: Gua ilustrada. Turrialba: CATIE, 1991. 225 p.
/ 168 /

caros que afectan la calidad del fruto de los ctricos en Colombia

5. ZULUAGA, Jose Ivn. Lista preliminar de caros de importancia en Colombia.


En: Acta Agronmica Colombiana. 1971. Vol. 21, No. 3. p. 119-132.
6. CASTAO, Nancy y LEON, Gloria Marcela. Controladores biolgicos asociados a las plagas que afectan el cultivo de los ctricos. Palmira. 1989. 285 p.
Trabajo de Grado par optar el Titulo de Ing. Agrnomo. Universidad Nacional
de Colombia Sede Palmira.
7. PADILLA, Juan Carlos. Identificacin de caros asociados a ctricos en el Valle
de Cauca e incidencia de especies fitfagas en un cultivo comercial. Palmira.
1998. 124 p. Trabajo de Grado par optar el Ttulo de Ingeniero Agrnomo.
Universidad Nacional de Colombia Sede Palmira.
8. MESA, Nora Cristina. Acaros de importancia agrcola en Colombia. En: Revista
Facultad Nacional de Agronoma. 1999. Vol. 52, No. 1. p. 321-363.
9. TORO, Shirley. Tabla de vida del caro Brevipalpus phoenicis Geijskes, Acari:
Tenuipalpidae, sobre maracuy. 89 p. Palmira. 1997. 10 p. Trabajo de Grado
par optar el Titulo de Ing. Agrnomo. Universidad Nacional de Colombia Sede
Palmira.
10. LEN, Guillermo; et al. Occurrence of Citrus leprosis virus in Llanos Orientales,
Colombia: Plant Diseases [En linea]. 2006. 90: 682 on-line as DOI: 10.1094/
PD-90-0682C
11. TORO, Shirley; et al. Parmetros poblacionales de Brevipalpus phoenicis (Geijskes) (Acari: Tenuipalpidae) sobre naranja Valencia. En: Resmenes XXXVIII
Congreso de la Sociedad Colombiana de Entomologa, 27 al 29 de Julio de 2011
Manizales. En prensa.
12. MESA, Nora Cristina. caros asociados a Ctricos en Colombia. [En lnea].
En: Primer Congreso Latinoamericano de citricultura, una jugosa oportunidad.
Diciembre 1 al 3, Hotel Intercontinental, Medelln Colombia. 2010. [Citado
el 23 abril de 2011]. Url disponible en: http://www.comfenalcoantioquia.com/
boletinempresas/MEMORIAS_CITRICOS/CONFERENCISTAS/NACIONALES/Nohora%20Cristina%20Mesa%20-%20Colombia/Acaros%20en%20
citricos%20-%20Congreso.pdf
13. QUIRS DE GONZALEZ, M. & Geraud-Pouey, F. Schizotetranychus hindustanicus (Hirst) (Acari: Tetranychidae), new spider mite pest damaging
citrus in Venezuela, South America. In: Program and Abstract Book, XI International Congress of Acarology (8-13 September 2002 Mrida, Mxico).
p. 255-256.
14. NAVIA, Denise y MARSARO, Alberto. First Report of the Citrus Hindu Mite,
Schizotetranychus hindustanicus (Hirst) (Prostigmata: Tetranychidae) in Brazil.
En: Neotropical Entomology. 2010. Vol. 39, No. 1; p. 140-143.
/ 169 /

Nora Cristina Mesa Cobo, saura Viviana Rodrguez Torres

15. GERSON, Uri y SMILEY, Robert. Acarine biocontrol agents. An illustrated key
and manual. London: Chapman and Hall, 1990. 167 p.
16. JEPPSON, L.; KEIFER, H. y BAKER, E. Mites injurious to economic plants.
Berkeley, CA: University of California Press; 1975. 614 p.
17. KRANTZ, Gerald; WALTER, D. E. A Manual of Acarology. Third edition.
Texas: Texas Tech University Press, 2009. 807 p.
18. MENDEL, Z.; GERSON, Uri. Is the mite Lorrya formosa Cooreman (Prostigmata: Tydeidae) a sanitizing agent in citrus groves? In: Oecol. Applied. 1982.
Vol. 3. p. 47 - 51.
19. GERSON, Uri. Biology and control of the broad mite, Polyphagotarsonemus
latus (Banks) (Acari:Tarsonemidae). In: Experimental Applied Acarology. 1992.
Vol. 13. p. 163-178.
20. CROSS-ROMERO, M.; PEA, Jorge. Relationship of broad mite (Acari: Tarsonemidae) to host phenology and injury levels in Capsicum annuum. In: Florida
Entomologist . 1998. Vol. 81. p. 515 - 526.
21. MESA, Nora Cristina; et al. Estudios del ciclo de vida y comportamiento de
las especies de caros de importancia econmica asociadas a cultivos en naranja
Valencia. Cali, Colombia: Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural y Universidad Nacional de Colombia Sede Palmira, 2011. 24 p.
22. VIERA, Mariane; CHIAVEGATO, Luiz. Biologia de Polyphagotarsonemus latus
(Banks) (Acari: Tarsonemidae) em limo siciliano (Citrus limn Burm). En: Annais Sociedade Entomologica Brasil. 1999. Vol. 28, No. 1. p. 27-32.
23. FERREIRA, Rodrigo; et al. Biologia, exigncias trmicas e tabela de fertilidade do caro branco Polyphagotarsonemus latus (Banks) (Acari: Tarsonemidae) em videira (Vitis
vinfera L.) cv. Itlia. En: Neotropical Entomology. 2006. Vol. 35, No. 1. p. 126-132.
24. MORAES, Gilberto y FLECHTMANN, Carlos. Manual de carologia. carologia Bsica e caros de plantas cultivadas no Brasil. Ribero Preto: Holos
Editora, 2008. 270 p.
25. SMITH, D.; BEATTIE, G. y BROADLEY, R. Citrus Pest and their enemies:
Integrated Pest Management in Australia. Australia: Queesland Deparment of
Primary Industries Series, 1997. 272 p.
26. PEA, Jorge. Relationships of broad mite (Acari: Tarsonemidae) density to lime
damage. In: Journal of Economic Entomology. 1990. Vol. 83. p. 2008-2015.
27. RODRGUEZ, Isaura; et al. Relacin entre la fenologa del cultivo de naranja
Valencia y la incidencia de Polyphagotarsonemus latus (Acari: Tarsonemidae). En:
Resmenes XXXVII Congreso de la Sociedad Colombiana de Entomologa SOCOLEN. 30 de junio al 2 de Julio. Bogot, 2010. p.156.
/ 170 /

caros que afectan la calidad del fruto de los ctricos en Colombia

28. MESA, Nora Cristina; et. al. Dinmica de poblacin y fenologa del dao causado por Polyphagotarsonemus latus y Phyllocoptruta oleivora en naranja Valencia.
Cali, Colombia: Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural y Universidad Nacional de Colombia Sede Palmira, 2011. 16 p.
29. VALENCIA, Milton; et al. Biologa y comportamiento de Phyllocoptruta oleivora (Ashmead) (Acari: Eriophyidae) sobre naranja Valencia. En: Resmenes XXXVII Congreso de la Sociedad Colombiana de Entomologa SOCOLEN. 30 de
junio al 2 de Julio Bogot. 2010. p 61.
30. OLIVEIRA, C. P. Biologia do caro da falsa ferrugem da falsa ferrugem Phyllocoptruta oleivora (Ashmead, 1879) (Acari: Eriophyidae) em citros. So Paulo.
2000. 41 p. Tese de Mestrado, Universidade Estadual de So Paulo, Botucatu.
31. ROGERS, Michael; et al. Florida Citrus Pest Management Guide: Rust Mites,
Spider Mites and Other Phytophagous Mites. Florida: Entomology and Nematology Departament, Florida Cooperative Extension Service, Institute of Food
and Agricultural Sciences, University of Florida. 2009. 8 p.
32. McCOY, Clayton W. Damage and control of Eriophyoid mites in crops. Stylar
feeding injury and control of eriophyoid mites in citrus. In: Lindquist, E.; Sabelis, M.; Bruin, J. Eriophyoid Mites. Their Biology, natural enemies and control.
Amsterdam: Elsevier, 1996; p. 513-526.
33. AGHAJANZADEH, Sirous & MALLIK, B. Sampling and distribution patterns
of citrus rust mite Phyllocoptrupta oleivora Ashmead (Acari: Eriophyidae) using
adhesive tape method. In: International Journal of Agriculture and Biology.
2007. Vol 9, No. 2; p. 329-332.
34. HALL, David; CHILDERS, Carl & EGER, Joseph. Binomial sampling to estimate rust mite (Acari: Eriophyidae) densities on orange fruit. In: Journal of
Economic Entomology. 2007. Vol. 100, No. 1. p. 233-240.
35. SMITH, D.; PEA, Jorge. 2002. Tropical Citrus Pests. [En lnea]. En: Pea J.
E.; Sharp, J. L.; Wysoki, M. (Eds.). Tropical Fruit Pests and Pollinators: Biology,
Economic Importance, Natural Enemies and Control. New York. CABI Publishing. 2002; p 57-102. [Citado el 23 de mayo de 2011] Url disponible en :
http://books.google.com.co/books?hl=es&lr=&id=t_BSs0hrAPAC&oi=fnd&p
g=PA1&dq=tropical+fruit+pests+pe%C3%B1a&ots=_Lijc6wLAB&sig=gsaxcE
dnlNepq1ZY7X5sagk6BsM#v=onepage&q&f=true

/ 171 /

/ 172 /

Captulo 7 / Chapter 7

Los insectos escama asociados


a los ctricos, con nfasis en
Praelongorthezia praelonga
(Douglas) (Hemiptera:
Coccoidea: Ortheziidae)
Takumasa Kondo*
Ana Lucia Peronti**
Ferenc Kozr***
va Szita****

Resumen

Corporacin Colombiana de
nvestigacin Agropecuaria,
Corpoica, Colombia
Correspondencia:
[email protected]

** Departamento de Ecologia e
Biologia Evolutiva, Universidade Federal de So Carlos
(UFSCar), So Carlos/SP,
Brazil.
Correspondencia:
[email protected]
*** Plant Protection nstitute, Hungarian Academy of
Sciences, Budapest, Hungary.
Correspondencia:
[email protected];
[email protected]

En el presente captulo se presenta un listado de 32 cocoideos que afectan los ctricos en Colombia. Se provee informacin general sobre sus morfologas, daos
y control, con nfasis en Praelongorthezia praelonga
(Douglas). Tambin se provee una clave taxonmica
con ilustraciones para separar las dos especies de Ortheziidae que afectan los ctricos en Colombia, i.e., P.
praelonga e Insignorthezia insignis (Browne).
Palabras clave: ctricos, coccoidea, cocoideos, escamas, plagas.
The scale insects associated with citrus, with
emphasis on Praelongorthezia praelonga
(Douglas) (Hemiptera: Coccoidea: Ortheziidae)
Abstract
In this Chapter, a list of 32 scale insect species affecting citrus in Colombia, as well as general information
on their morphology, damage and control is presen/ 173 /

Takumasa Kondo, Ana Lucia Peronti, Ferenc Kozr, va Szita

ted, with emphasis on Praelongorthezia praelonga (Douglas). A taxonomic key and illustrations are provided also in order to separate the two
species of Ortheziidae that affect citrus in Colombia, i.e., P. praelonga
and Insignorthezia insignis (Browne).
Key words: citrus, coccoidea, coccoids, scales, pests.

ntroduccin
Los insectos escama o cocoideos son hempteros que se alimentan de la savia
de las plantas, e incluyen todos los miembros de la superfamilia Coccoidea.
Estos insectos estn relacionados con los pulgones (Aphidoidea), las moscas
blancas (Aleyrodoidea) y pslidos (Psylloidea), y junto constituyen el suborden
Sternorrhyncha1. En la actualidad, hay unas 32 familias existentes de insectos
escama reconocidas, dependiendo de los autores2. Los insectos escama se dividen generalmente en dos grupos informales: los arqueococoideos y los neococoideos. A excepcin de una sola familia (i. e., Putoidae), los arqueococoideos
generalmente se pueden reconocer por la presencia de 28 pares de espirculos
abdominales, los cuales estn ausentes en los neococoideos.
Los ctricos son probablemente los hospederos ms preferidos por los insectos
escama. Segn el banco de datos de insectos escama del mundo ScaleNet3, hay 319
especies distribuidas en 11 familias de insectos escama registrados en Citrus spp. En
Colombia se conocen alrededor de 200 especies de escamas en 13 familias4-13. De
las especies registradas en Colombia, 32 especies distribuidas en 6 familias: Diaspididae, Coccidae, Pseudococcidae, Monophlebidae, Ortheziidae y Margarodidae,
se consideran plagas de los ctricos14 (tabla 1). La Ortezia de los ctricos, Praelongorthezia praelonga (Douglas) (previamente conocida como Orthezia praelonga) es
considerada una de las plagas ms importantes de los ctricos en Colombia.

Escamas o escamas protegidas (Diaspididae)


Las escamas, tambin conocidas como escamas protegidas o diaspdidos, son
insectos planos, muy pequeos, generalmente de 1 a 2 mm de dimetro, con una
cubierta de color variable. Las ninfas femeninas escogen un sitio del rbol apropiado
para su alimentacin; all clavan su aparato bucal, se alimentan, mudan y permanecen en el mismo sitio hasta que mueren. La hembra tiene tres instares: al primero
se le llama gateador, tiene antenas y patas bien desarrolladas y se dispersan en este
estado; el segundo instar se desarrolla en el mismo sitio que escoge el gateador para
/ 174 /

Los insectos escama asociados a los ctricos, con nfasis en Praelongorthezia praelonga...

alimentarse y permanece all, ya que no tiene patas; la escama de cera del segundo
instar tiene dos capas: la capa superior es la exuvia (muda del insecto) del gateador,
ms la capa que la larva de este estadio produce. La hembra adulta se parece a la ninfa del segundo instar, pero regularmente es ms grande, tiene ms poros, una vulva,
y su cobertura cerosa o escama est compuesta por tres capas de cera (la exuvia del
primer instar, la capa cerosa del segundo instar, y una tercera capa que produce el
adulto). Muchas escamas viven en colonias y atacan troncos, ramas, hojas y frutos.
Los rboles afectados pueden tolerar grandes poblaciones de estos insectos, pero
son ms susceptibles en pocas de sequa o en el estado de plntulas. Las escamas
pueden aparecer en cualquier parte de las plantas, desde las hojas, hasta los frutos,
ramas, troncos y races. Las plntulas son especialmente susceptibles y pueden llegar
a secarse cuando las poblaciones son muy altas. La especie ms comn en los ctricos
es el piojo blanco de los ctricos, Unaspis citri Comstock (figura 1A).

Figura 1. A. Unaspis citri (Comstock) (Diaspididae).


Escamas de color caf hembras; escamas de color blanco, puparios del
macho. B. Coccus viridis (Green) (Coccidae), hembra adulta. C. cerya
purchasi Maskell (Monophlebidae), adulto con ovisaco. D. Planococcus citri
(Risso) (Pseudococcidae), hembra adulta (centro) y gateador (derecha).
Fuente: T. Kondo.

Escamas blandas (Coccidae)


Por lo general estas escamas son de mayor tamao que las escamas protegidas
y las cochinillas harinosas. Este grupo est caracterizado por la presencia de un
par de placas anales, las cuales se abren para excretar la miel de roco. Son insectos pequeos, inmviles, convexos o planos; muchos estn cubiertos por una
cera delgada transparente; pero tambin hay especies con cera abundante como
las del gnero Ceroplastes. Son de diferentes formas y colores, segn la especie.
La hembra tiene cuatro instares, al primer instar se le denomina gateador, tiene
antenas y patas bien desarrolladas. En este estadio se dispersan. Despus del
primer estado ninfal, las escamas blandas pasan por el segundo y tercer estado
/ 175 /

Takumasa Kondo, Ana Lucia Peronti, Ferenc Kozr, va Szita

ninfal. Las ninfas del segundo estado ninfal se parecen a los gateadores pero
carecen de setas largas en las placas anales como el gateador. Las del tercer instar
se parecen a la hembra adulta pero son ms pequeas, tienen menos poros y no
tienen una vulva. En ataques fuertes pueden causar defoliacin. Muchos de ellos
excretan miel de roco, un lquido azucarado que promueve el desarrollo de la
fumagina. Estas condiciones son severamente dainas en plntulas o en rboles
de mucha edad. Tambin pueden causar un dao cosmtico cuando infestan
directamente el fruto, o cuando la fumagina crece en los frutos cubiertos por la
miel de roco que stos excretan. Una de las especies ms comunes en ctricos en
Colombia es la escama verde de los ctricos Coccus viridis (Green) (figura 1B).

Cochinillas harinosas (Pseudococcidae)


Son insectos de forma oval, generalmente caracterizados por un cuerpo blando,
cubierto con proyecciones de cera blanquecinas, de diferentes tamaos. Al igual
que las escamas blandas, tienen 4 instares, el primer instar o gateador, las ninfas del
segundo y tercer instar, y la hembra adulta (cuarto instar). Las cochinillas harinosas
se encuentran distribuidas por todo el mundo. Una de las especies ms comunes en
los ctricos en Colombia es Planococcus citri (Risso). Muchas especies de cochinillas
harinosas, incluyendo las tres especies registradas sobre los ctricos en Colombia,
Ferrisia virgata (Cockerell), P. citri (figura 1C) y Pseudococcus longispinus (Targioni
Tozzetti), son especies polfagas, consideradas plagas de frutales y ornamentales en
muchos lugares donde ocurren. En los ctricos pueden producir secamiento de
brotes cuando sus poblaciones son altas, y la miel de roco que excretan, junto con
la fumagina que crece en ellas pueden daar la calidad de los frutos.

Perlas de tierra (Margarodidae) y Cochinillas Acanaladas (Monophlebidae)


Posada14 registra a una perla de tierra Margarodes sp. (Margarodidae) como
una plaga de los ctricos. Las perlas de tierra son insectos escama de hbitos subterrneos, y se les llama perlas de tierra porque estos insectos tienen un estado de
cisto el cual se asemeja a una perla. Las cochinillas gigantes de la familia Monophlebidae, hasta hace poco, se incluan en la familia Margarodidae, pero ahora
se consideran como una familia separada. En Colombia, se han reportado dos
especies de Monophlebidae, Crypticerya montserratensis (Riley & Howard) e Icerya
purchasi Maskell (figura 1D). La cochinilla acanalada de los ctricos, I. purchasi,
ha sido considerada una plaga devastadora de los ctricos en los Estados Unidos en
el pasado, pero ahora sus poblaciones regularmente son controladas por enemigos
/ 176 /

Los insectos escama asociados a los ctricos, con nfasis en Praelongorthezia praelonga...

naturales, p. ej., el coccinlido Rodolia cardinalis (Mulsant) (Coleoptera: Coccinellidae) y el mosco parasitoide Cryptochaetum iceryae (Williston) (Diptera: Cryptochaetidae). En Colombia, I. purchasi no se considera una limitante de los ctricos.
Tabla 1. Listado de cocoideos registrados
en ctricos en Colombia (Adaptado de Posada14).
Family Coccidae (7 spp.)
Ceroplastes floridensis Comstock
Coccus hesperidum Linnaeus
Coccus viridis (Green)
Protopulvinaria longivalvata Green
Pulvinaria psidii (Maskell)
Saissetia coffeae (Walker)
Saissetia oleae (Olivier)
Familia Diaspididae (17 spp.)
Aspidiotus nerii Bouche
Aulacaspis tubercularis Newstead
Chrysomphalus aonidum (Linnaeus)
Chrysomphalus dictyospermi (Morgan)
Hemiberlesia lataniae (Signoret)
Hemiberlesia palmae (Cockerell)
Ischnaspis longirostris (Signoret)
Lepidosaphes beckii (Newman)
Lepidosaphes gloverii (Packard)
Lopholeucaspis sp.
Parlatoria cinerea Hadden
Parlatoria pergandii Comstock
Pinnaspis aspidistrae (Signoret)
Pinnaspis strachani (Cooley)
Pseudaonidia trilobitiformis (Green)
Selenaspidus articulatus (Morgan)
Unaspis citri (Comstock)
Familia Margarodidae (1 sp.)
Margarodes sp.
Familia Monophlebidae (2 spp.)
*Crypticerya montserratensis (Riley & Howard) [Probablemente C. multicicatrices Kondo & Unruh;
ver Notas]
Icerya purchasi Maskell
Familia Ortheziidae (2 spp.)
Insignorthezia insignis (Browne)
Praelongorthezia praelonga (Douglas)
Family Pseudococcidae (3 spp.)
Ferrisia virgata (Cockerell)
Planococcus citri (Risso)
Pseudococcus longispinus (Targioni Tozzetti)
Total: 32 spp.

/ 177 /

Takumasa Kondo, Ana Lucia Peronti, Ferenc Kozr, va Szita

Notas. Ceroplastes bergi Cockerell, listada por Posada14, no se incluy en la lista


debido a que esta especie solo ha sido reportada para la Argentina; por lo tanto, este
registro se considera dudoso. No hay ejemplares voucher del estudio realizado por
Posada14; por lo tanto, sus identificaciones no pueden ser verificadas. (*) Posada14 list
a Crypticerya montserratensis como plaga de los ctricos, pero segn Kondo y Unruh11
el grupo Crypticerya montserratensis, cual est compuesto por C. brasiliensis Hempel,
C. montserratensis, C. multicicatrices Kondo & Unruh y C. zeteki (Cockerell) son similares en su morfologa externa, por lo tanto, registros de C. montserratensis y C. zeteki
en Colombia muy probablemente son identificaciones errneas de la especie polfaga
C. multicicatrices. En Colombia solo se ha confirmado la presencia de tres especies de
la tribu Iceryini, estas son: C. abrahami (Newstead), C. multicicatrices y I. purchasi11.

Ortezias (Ortheziidae)
Los miembros de la familia Ortheziidae se conocen comnmente como ortzidos y pertenecen al grupo de los arqueococoideos. Actualmente hay 202 (194
existentes y 8 fsiles) especies de ortzidos (familia Ortheziidae) descritos3, 15. La
ortezia de los ctricos Praelongorthezia praelonga (Douglas) (figura 2A) y la cochinilla blanca menor de los ctricos Insignorthezia insignis (Browne) (figura 2B) son
altamente polfagas y son consideradas plagas dondequiera que ocurren. Insignorthezia insignis se distribuye en todas las regiones zoogeogrficas del mundo. Por
otro lado, P. praelonga es de origen neotropical, y su distribucin hasta hace poco
se limitaba a Centroamrica, Suramrica y el Caribe. Aunque no est reportada
en la literatura cientfica, P. praelonga fue introducida en las zonas tropicales de
frica Occidental a principios de los 2000, en la Repblica del Congo (Brazzaville) y la Repblica Democrtica del Congo en donde se ha convertido en una
plaga importante de los ctricos (A. Kiyindou, comunicacin personal).

Figura 2. A. Praelongorthezia praelonga (Douglas), hembra adulta, ninfas y


exuvias de ninfas. B. nsignorthezia insignis (Browne), hembra adulta y ninfas.
Fuente: T. Kondo.

/ 178 /

Los insectos escama asociados a los ctricos, con nfasis en Praelongorthezia praelonga...

mportancia econmica

Praelongorthezia praelonga (figura 2A) causa daos a las plantas, tanto directamente por su alimentacin como indirectamente debido a los
sntomas de fumagina a las que se asocia. Segn Koteja16, la mayora de
especies de ortzidos viven en la hojarasca del suelo en ambientes hmedos y se alimentan de hongos, musgos y races de diferentes plantas.
Los hospederos verdaderos o preferidos de la mayora de las especies de
ortzidos son desconocidos. A diferencia de la mayora de las especies de
la familia Ortheziidae, I. insignis (figura 2B) y P. praelonga (figura 2A) son
muy polfagas y pueden causar infestaciones severas asociadas con fumagina y muerte de ramas. Las dos especies se pueden encontrar en los ctricos,
pero P. praelonga es la ms frecuente en los ctricos en Colombia (figura 3).
En Colombia, P. praelonga es una plaga comn de los ctricos; los insectos prefieren alimentarse en el envs de las hojas, pero se pueden encontrar
en ambas superficies, y en ramas, flores y troncos cuando las poblaciones
son muy altas. La ortezia de los ctricos se ha registrado como una plaga en rboles frutales desde 1973 en Colombia, en el departamento de
Antioquia. En 1975 se registr en Palmira, en el departamento del Valle
del Cauca, atacando rboles de ctricos y causando infestaciones severas
asociadas a hongos de fumagina y muerte de ramas. La fumagina, generalmente causada por un hongo, Capnodium sp., se desarrolla en la miel
de roco producida por los insectos, y causa una reduccin en la tasa fotosinttica de la planta (Fig. 3). En el departamento del Valle del Cauca,
el crotn ornamental (Codiaeum variegatum) y Bougainvillea spp. son los
reservorios ms importantes de este insecto, y pueden convertirse en una
fuente de infestacin permanente. La amplia gama de plantas hospederas,
la alta capacidad reproductiva del insecto y la escasez de control biolgico
de P. praelonga han contribuido a la reputacin de este insecto como una
plaga grave.
Infestaciones severas de P. praelonga en las plantas de ctricos se asocian a menudo con la falta de enemigos naturales, y esto suele ser una
consecuencia directa del uso de plaguicidas. La prctica del control qumico de P. praelonga, adems de ser ineficaz, a menudo destruye el equilibrio natural del ecosistema, causando la aparicin de nuevas plagas de
insectos y el resurgimiento de otros. En Brasil esta especie es uno de los
insectos ms importantes asociados con Citrus spp., que causa graves
prdidas17. En la Repblica del Congo y la Repblica Democrtica del
/ 179 /

Takumasa Kondo, Ana Lucia Peronti, Ferenc Kozr, va Szita

Congo, P. praelonga se ha reportado por causar la defoliacin completa


de rboles (A. Kiyindou, comunicacin personal).

Figura 3. Tres especies de ctricos severamente infestados con


P. praelonga que muestran sntomas de fumagina.
Fuente: T. Kondo.

Origen geogrfico de Praelongorthezia praelonga (Douglas)


La ortezia de los ctricos ocurre en Amrica Central, Amrica del Sur y en
el Caribe, y aunque es de origen neotropical, su rea de distribucin natural
exacta se desconoce.

Distribucin mundial. Regin Nertica: Mxico. Regin Neotropical:


Antigua y Barbuda; Argentina; Barbados; Bolivia; Brasil; Islas Vrgenes Britnicas; Colombia; Dominica; Ecuador; Granada; Guadalupe; Guyana; Jamaica; Marie-Galante; Martinica; Panam; Per; Puerto Rico e Islas Vieques;
Saint Croix; San Bartolom; San Martin; Trinidad y Tobago; Islas Vrgenes
de los Estados Unidos; Venezuela3, 18. Regin Afro-Tropical: Repblica del
Congo, Repblica Democrtica del Congo.
Morfologa externa

La forma, nmero y distribucin de las placas de cera de los ortzidos (morfologa externa) han demostrado ser tiles en la identificacin a escala genrica, y en algunos casos para la identificacin de especies. Las fotos digitales del vientre y el dorso
de los ortzidos se pueden utilizar para la separacin rpida de algunos ortzidos.
Las placas de cera dorsales consisten en una placa de cera central, una placa
de cera subcentral y placas de cera marginales; las placas de cera ventrales se
componen de lminas de cera mesocoxales y metacoxales (figura 4). La distribucin de las placas de cera de las dos especies de ortzidos registrados en
Colombia se muestra en la figura 5.
/ 180 /

Los insectos escama asociados a los ctricos, con nfasis en Praelongorthezia praelonga...

Figura 4. Morfologa externa, dorsal y ventral de un ortzido indicando la


posicin de las placas de cera.
Fuente: . Szita.

Clave prctica para la separacin de ortzidos en ctricos en Colombia


1. Superficie ventral. Placas cerosas alrededor de las coxas poco desarrolladas; placas cerosas mesocoxales ausentes. Superficie dorsal: dorso con muy
poca cera; con solo unas pocas protrusiones de cera en la zona central del
trax Insignorthezia insignis (figura 5A, C)

Superficie ventral: Placas cerosas en la zona ventral, bien desarrolladas.


Superficie dorsal: placas cerosas subcentrales poco desarrolladas o ausentes;
cuando presentes, compuestas por una cera harinosa fcilmente desprendible Praelongorthezia praelonga (figura 5B, D)
Nota. En Colombia solo se han reportado dos especies de Ortheziidae, y
estas especies corresponden a I. insignis y P. praelonga, las mismas que atacan
los ctricos en este pas.

Biologa
Las ninfas y las hembras adultas de P. praelonga caminan por todo el hospedero en busca de un sitio de alimentacin adecuado. Los dos primeros estados
del macho son similares a los de la hembra, sin embargo, despus de terminar
el segundo estado ninfal, los machos dejan de alimentarse y se desplazan al
tronco del hospedero (figura 6A y B), donde permanecen agrupados hasta
que se transforman en adultos (recuadro figura 6B).
/ 181 /

Takumasa Kondo, Ana Lucia Peronti, Ferenc Kozr, va Szita

Figura 5. Vista dorsal y ventral de las placas cerosas de dos especies de


ortzidos comunes en los ctricos. A & C. nsignorthezia insignis. B & D.
Praelongorthezia praelonga.
Fuente: A & C por . Szita; B & D por T. Kondo.

Figura 6. A. Tronco de rbol con pupas de machos de P. praelonga.


B. Hoja seca en la superficie del suelo con pupas macho.
El recuadro muestra macho adulto. Fotos tomadas en Colombia.
Fuente: T. Kondo.

/ 182 /

Los insectos escama asociados a los ctricos, con nfasis en Praelongorthezia praelonga...

Segn un estudio realizado en ctricos en So Paulo, Brasil, las poblaciones


de P. praelonga son ms altas durante los meses ms fros y secos del ao, cuando
hay baja precipitacin y baja humedad relativa en el aire19. La temperatura ptima para el desarrollo de P. praelonga es de unos 25C, con el lmite de temperatura mxima de 38C, y el lmite mnimo de 15C. Los insectos tienen una vida
til de 40 a 200 das. En el campo, los machos comnmente vuelan al atardecer,
y los insectos en cpula se pueden observar en este momento en las plantas
infestadas. Agregaciones de ninfas recin emergidas se forman en torno a sus
adultos y ah se alimentan21. La duracin del ciclo de vida del P. praelonga se ve
afectada por la especie de hospedero en que se alimentan y por la temperatura.
Lima20 estudi la biologa de P. praelonga en condiciones de laboratorio (temperatura de 27,5 1C, humedad relativa de 73,8 0,4 y un fotoperodo de 14
horas). El ciclo de vida se complet en 81,5 7,3 das en Solanum tuberosum y
en 60,9 2,5 das en Alternanthera dentata f. rubiginosa. El tipo de dieta influy en el perodo de oviposicin y en el nmero promedio de huevos puestos,
que fueron significativamente mayores en adultos criados en tubrculos de papa
germinados. La longevidad de las hembras estuvo directamente correlacionada
con la duracin del perodo de oviposicin y el nmero de huevos puestos. Los
machos, despus de emerger como adultos, vivieron en promedio 5,0 0,7 das.
La cpula se llev a cabo dentro de las primeras 7,2 0,5 horas despus de la
emergencia de los machos. El nmero de montas por macho fue de 8 1 a 24
2 cpulas cuando una o ms hembras estaban disponibles. La duracin de cada
copulacin vari entre 1,4 a 11,2 minutos, con un promedio de 6,4 2,5 minutos. La proporcin de sexos fue de 0,67 lo que indica una relacin aproximada
de un macho a dos hembras.
Neves; et al21 estudiaron los requisitos de temperatura y voltinismo de P.
praelonga criados en Citrus limonia en Brasil, y determinaron que el nmero de generaciones de la especie por ao vara entre 5,0 y 6,6. Restrepo; et
al22 estudiaron el ciclo de vida de P. praelonga en condiciones de campo en
Colombia. Los huevos eclosionaron aproximadamente 7 das despus de ser
ovipuestos, y los tres instares ninfales de la hembra, i. e., el primer instar o
gateador, y las ninfas del segundo y tercer instar, duraron 31, 35 y 64 das,
respectivamente. La prepupa del macho dur en promedio 32 das y la fase de
pupa dur 4 a 5 das. Los machos adultos alados viven un mximo de 8 das y
vuelan activamente. Las hembras adultas vivieron durante un mximo de 90
das. Cada hembra adulta puso 85 a 106 huevos. Las ninfas de primer instar,
que se agrupan en torno a sus madres, empiezan a dispersarse en el follaje
poco despus de la muda al segundo instar.
/ 183 /

Takumasa Kondo, Ana Lucia Peronti, Ferenc Kozr, va Szita

Nota sobre la actividad de vuelo del macho. Lima20 report que los machos de P. praelonga vuelan al atardecer en Brasil, pero en Colombia los machos se han observado volando principalmente en las horas de la maana (T.
Kondo, observacin personal).

Mtodos de control
Control qumico

Carvalho23 discuti el uso del control qumico de la siguiente manera: en


Brasil, no hay productos qumicos registrados que se puedan utilizar para controlar a P. praelonga en la mayora de los frutales. Sin embargo, en el futuro,
cuando estos productos estn disponibles en el mercado, se recomienda dar
preferencia a productos que son menos dainos para los seres humanos y el
medioambiente. El uso de productos qumicos debe estar dirigido a los focos
de infestacin en el huerto, y las aplicaciones al lote entero deben evitarse a
fin de preservar los enemigos naturales que mantienen a P. praelonga bajo un
equilibrio ecolgico.
Control biolgico

Para el Estado de Ro de Janeiro, Brasil, Gonalves24 dio una lista de enemigos naturales, incluyendo la avispa Cales noacki (Hymenoptera: Aphelinidae),
y las moscas Gitona brasiliensis y G. fluminensis (Diptera: Drosophilidae). En
otro estudio, Gonalves25 seal que Pentilia egena y Scymnus sp. (Coleoptera:
Coccinellidae) se alimentan de los huevos dentro del ovisaco de P. praelonga
y listan tambin varios hongos patgenos, tales como Verticilium lecanii, Cladosporium sp. y Fusarium sp.
En Colombia, Velsquez; et al26 estudiaron los agentes benficos para el
control de la ortezia de los ctricos y encontraron que los depredadores, aunque por lo general se encuentran en bajas poblaciones, pueden ayudar a reducir las poblaciones. En Brasil y Colombia, las bacterias y los hongos han
sido evaluados como agentes de control, con resultados prometedores. Es necesario aumentar y diversificar la fauna benfica de P. praelonga con el fin de
sustituir el uso de insecticidas. La prctica actual del control qumico no es
recomendable porque es ineficaz, perjudicial a la salud humana y al medioambiente, y es costosa.
El Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) y la Corporacin Colombiana de Investigacin Agropecuaria (Corpoica) llevaron a cabo una investiga/ 184 /

Los insectos escama asociados a los ctricos, con nfasis en Praelongorthezia praelonga...

cin sobre estrategias de manejo de plagas para el control de esta importante


plaga de los ctricos. En su rea de distribucin natural, por lo menos en
Colombia, la ortezia de los ctricos parece ser controlada por varios enemigos
naturales, incluyendo una especie no identificada de Hyperaspidinae (Coleoptera: Coccinellidae); Ambracius dufouri y Proba vittiscutis (Hemiptera:
Miridae); Chrysopa sp. (Neuroptera: Chrysopidae), y una especie de mosca
identificada como Drosophilidae cuyas larvas se alimentan de los huevos de
P. praelonga26. Sin embargo, el uso comn de productos de sntesis qumica,
a menudo resulta en el desequilibrio ecolgico de P. praelonga y sus enemigos
naturales, con presencia en brotes poblacionales de esta plaga. Para el control
de la ortezia de los ctricos, se recomienda una estrategia de manejo integrado
de plagas que combina el uso de jabones, insecticidas, aceites, y mtodos de
control cultural y biolgico.
Control cultural
El mantenimiento ptimo de los rboles en aspectos relacionados con
manejo de malezas, plateos, fertilizacin, riegos, podas, etc. servir de estrategia para lograr el desarrollo de rboles vigorosos y sanos, situacin que
favorece la implementacin de un programa de manejo integrado de plagas
que afectan los ctricos. Las inspecciones permanentes al huerto para detectar la presencia de las primeras colonias de P. praelonga y, por ende, de los focos, facilitar el manejo oportuno de la plaga y evitar su dispersin y dao
generalizado. Entre las estrategias de manejo integrado de plagas, el control
cultural puede reducir y en algunos casos erradicar la ortezia de los ctricos
si la infestacin se encuentra en sus primeras etapas23. Las prcticas culturales recomendadas para el control de P. praelonga incluyen las siguientes:
(1) la eliminacin de malezas alrededor de los rboles infestados, (2) poda
y destruccin de ramas infestadas y material vegetal muerto, (3) fertilizacin de las plantas con minerales y fertilizantes orgnicos para aumentar la
resistencia de las plantas, (4) la eliminacin de plantas y hierbas que sirven
como reservorios de la plaga en el interior o alrededor del huerto, y (5) la
cosecha de fruta infestada slo despus de cosechar la fruta sana para evitar
la dispersin de la plaga a otros lugares.
Control mecnico
Cuando hay pequeas fuentes de infestacin de P. praelonga, estas pueden ser destruidas de forma manual. Con el fin de lograr un buen control
con este mtodo, las inspecciones frecuentes y meticulosas deben llevarse
/ 185 /

Takumasa Kondo, Ana Lucia Peronti, Ferenc Kozr, va Szita

a cabo en la plantacin, revisando con atencin las ramas y hojas para detectar infestaciones incipientes de la plaga y luego destruirlas. Al realizar la
inspeccin manual de forma peridica, es posible prevenir la dispersin de
la plaga en el huerto.
Cuarentena, deteccin e identificacin

La ortezia de los ctricos puede ser difcil de detectar en inspecciones de


cuarentena debido a su tamao relativamente pequeo (sobre todo las ninfas) y su naturaleza ssil. Praelongorthezia praelonga puede confundirse con
otras especies de ortzidos, como la cochinilla blanca menor de los ctricos I.
insignis. En este captulo se presenta una clave prctica para la identificacin
en campo de las dos especies de ortzidos reportadas como plagas de ctricos
en Colombia. En otros pases, incluyendo Guatemala y Per, se ha reportado
otra especie de ortzido, Insignorthezia pseudinsignis (Morrison) sobre ctricos;
por lo tanto, la clave en este trabajo tiene que ser usada con cautela. La identificacin precisa de los insectos escama requiere un examen detallado de las
caractersticas microscpicas de las hembras adultas jvenes por un taxnomo
experto del grupo o una persona capacitada. Existen claves taxonmicas e
ilustraciones para la identificacin de miembros de la familia Ortheziidae por
Kozar15 y Morrison27, 28.

Conclusiones
En Colombia hay reportadas 31 especies en seis familias de insectos escama en ctricos. La especie ms importante a nivel nacional es la ortzia de
los ctricos P. praelonga (familia Ortheziidae), la cual ocasiona daos directos
debido a la succin de la sabia que debilita la planta, e indirecto debido a la
fumagina que crece sobre la miel de roco que excreta, causando un dao cosmtico y disminuyendo la tasa fotosinttica de la planta. Otro insecto escama
comn en los ctricos es el piojo blanco de los ctricos, Unaspis citri (familia
Diaspididae). Hay muchas otras especies que pueden encontrarse causando
daos como C. hesperidum, C. viridis (familia Coccidae), Lepidosaphes spp.,
Parlatoria spp. y Pinnaspis sp. (familia Diaspididae), entre otras. Hay una gran
cantidad de enemigos naturales que controlan los insectos escama en el campo, sin embargo, estos insectos pueden convertirse en plagas cuando el balance ecolgico entre el insecto escama y sus enemigos naturales se daa debido a
varios factores, entre ellos biticos y abiticos, y por el uso indiscriminado de
pesticidas. Se recomienda un manejo integrado de plagas, que combine mto/ 186 /

Los insectos escama asociados a los ctricos, con nfasis en Praelongorthezia praelonga...

dos amigables con el medio ambiente, teniendo en cuenta la preservacin de


la fauna benfica y la baja residualidad de pesticidas en los productos.

Agradecimientos
Los estudios por los Drs. F. Kozr y va Szita fueron financiados por OTKA
Grant No 75889. Se le agradece al Dr. Antoine Kiyindou por informacin
sobre la distribucin de P. praelonga en frica. Agradecimientos especiales a
los Drs. Penny Gullan y Douglas Williams por una revisin del texto original
y por sus valiosos comentarios.
Referencias bibliogrficas
1. GULLAN, P. J. & MARTIN, J. H. Sternorrhyncha (jumping plant-lice, whiteflies, aphids and scale insects). In: Resh, V.H. and Card, R.T. (eds), Encyclopedia of Insects. 2nd ed. San Diego: Elsevier, 2009. p. 957967.
2. GULLAN, P. J. & COOK, L. G. Phylogeny and higher classification of the scale insects (Hemiptera: Sternorrhyncha: Coccoidea). In: Zhang, Z.-Q. & Shear,
W.A. (eds), Linnaeus Tercentenary: Progress in Invertebrate Taxonomy. Zootaxa.
2007. 1668: 413425.
3. BEN-DOV, Y.; MILLER, D. R. & GIBSON, G.A.P. ScaleNet: a database of the
scale insects of the world. [Online] 2011. Available from: http://www.sel.barc.
usda.gov/scalenet/scalenet.htm
4. KONDO, T. The Scale Insects of Colombia (Hemiptera: Coccoidea). En: Biota
Colombiana. 2001. Vol. 2, No. 1. p. 3148.
5. ________. Ceroplastes rubens Maskell (Hemiptera: Coccidae), a new coccid record for Colombia. En: Boletn del Museo de Entomologa de la Universidad del
Valle. 2008. Vol. 9, No. 1. p. 66-68.
6. ________. Taxonomic review of the myrmecophilous, meliponiphilous and
rhizophilous soft scale genus Cryptostigma Ferris (Hemiptera: Coccoidea: Coccidae). En: Zootaxa. 2010. 72 p.
7. ________. Description of a new coccid (Hemiptera, Coccidae) on avocado
(Persea americana Mill.) from Colombia, South America. En: ZooKeys. 2010.
Vol. 42. p. 3745.
8. ________. Transfer of the myrmecophilous soft scale insect Neolecanium amazonensis Foldi to Foldilecanium gen. nov. (Hemiptera: Coccidae), with description of a new species from Colombia. Kondo, T. En: Insecta Mundi 0167. 2011.
p. 110.
/ 187 /

Takumasa Kondo, Ana Lucia Peronti, Ferenc Kozr, va Szita

9. KONDO, T. & GULLAN P. J. A new species of Austrotachardiella Chamberlin


on guava in Colombia (Hemiptera: Coccoidea: Kerriidae), with a revised key to
the species of the genus. En: Neotropical Entomology. 2005. Vol. 34, No. 3. p.
395401.
10. ________. Synonymy of Plotococcus Miller & Denno with Leptococcus Reyne,
and description of a new species from Colombia (Hemiptera: Pseudococcidae).
En: Neotropical Entomology. 2008. Vol. 37, No. 1. p. 5157.
11. KONDO, T. & UNRUH, C. A New Pest Species of Crypticerya Cockerell (Hemiptera: Monophlebidae) from Colombia, with a Key to Species of the Tribe
Iceryini Found in South America. En: Neotropical Entomology. 2009. Vol. 38,
No. 1. p. 92100.
12. KONDO, T. & WILLIAMS, M. L. A new species of myrmecophilous soft scale
insect from Colombia in the genus Akermes Cockerell (Hemiptera: Coccoidea:
Coccidae). En: Revista Colombiana de Entomologia. 2004. Vol. 30, No. 2. p.
137141.
13. KONDO, T.; RAMOS-PORTILLA, A. A. & VERGARA-NAVARRO, E. V.
Updated list of mealybugs and putoids from Colombia (Hemiptera: Pseudococcidae and Putoidae). En: Boletn del Museo de Entomologa de la Universidad
del Valle. 2008. Vol. 9, No. 1. p. 29-53.
14. POSADA, L. O. Lista de insectos dainos y otras plagas en Colombia. 4 ed.,
Bogot. Boletn Tcnico 43. Instituto Colombiano Agropecuario. 1989. 662 p.
15. KOZR, Ferenc. Ortheziidae of the World. Budapest, Hungary: Plant Protection Institute, Hungarian Academy of Sciences, 2004. 525 p.
16. KOTEJA, J. Scale insects (Hemiptera: Coccinea) from Cretaceous Myanmar
(Burmese) amber. En: Journal of Systematic Palaeontology. 2004. Vol 2, No. 2.
p. 109114.
17. CASSINO, P.C.; LIMA, A.F & RACCA, Filho, F. Orthezia praelonga Douglas,
1891 em plantas citricas no Brasil (Homoptera, Ortheziidae). En: Arquivos da
Universidade Federal Rural (Rio de Janeiro), Brazil, 1991. Vol. 14, No. 1. p. 3557.
18. MATILE-FERRERO, D. & TIENNE, J. Cochenilles des Antilles franaises et
quelques autres les des Carabes [Hemiptera, Coccoidea]. En: Revue Franaise
dEntomologie. 2006. Vol. 28. p. 161190.
19. PRATES, H.S. & PINTO, W. B. Orthezia: uma praga potencial. Casa da Agricultura. 1987. Vol. 9, No. 6. p. 1619.
20. LIMA, A. F. Bioecologia de Orthezia praelonga Douglas, 1891 (Homoptera, Ortheziidae). MSc thesis, Escola Superior de Agricultura Luiz de Queiroz, USP,
Piracicaba. 1981.
/ 188 /

Los insectos escama asociados a los ctricos, con nfasis en Praelongorthezia praelonga...

21. NEVES, A. D.; HADDAD, M.; ZRIO, N. G. and POSTALI PARRA, J. R.


Exigncias trmicas e estimativas do nmero de geraes de ortezia dos citros
criadas em limo cravo. En: Pesquisa Agropecuria Brasileira, Braslia, Brazil,
2010. Vol. 45, No. 8. p. 791796.
22. RESTREPO G. H.; OCHOA L. P.; LEN M. G. y DE LA CRUZ, T. Ciclo de
vida y hbitos de Orthezia sp., plaga de ctricos. En: Resmenes XVIII Congreso
Socolen, Santaf de Bogot, 1991. p. 23.
23. CARVALHO R. S. Controle integrado da Ortezia em pomares e hortos comerciais. En: Embrapa Circular Tcnica. 2006. No. 82. p. 6.
24. GONALVES, C. R. Perspectivas de combate biolgico das principais pragas
das plantas cultivadas na baixada Fluminense. Boletim do Instituto de Ecologia e
Experimentao Agrcolas. En: Anais Simpsio Brasileiro sobre Combate Biolgico, 1. Rio de Janeiro, Brazil, 1962. p. 7376.
25. GONALVES, C. R. Procedimento da Orthezia praelonga na Baixada Fluminense e seu combate racional. Boletim do Campo, Brazil. 1963. Vol. 19, No.
166. p. 1215.
26. VELSQUEZ V. H.; NUEZ, B. & GARCA, R. F. Avances en el reconocimiento y evaluacin de agentes benficos de Orthezia praelonga Douglas. En:
Proceedings XIX Congress of Socolen. Manizales, Colombia, 1992. p. 15.
27. MORRISON, H. Classification of scale insects of the subfamily Ortheziinae.
En: Journal of Agricultural Research. 1925. Vol. 30. p. 97154.
28. MORRISON, H. Classification of the Ortheziidae. Supplement to Classification of scale insects of the subfamily Ortheziinae. En: United States Department
of Agriculture Technical Bulletin. 1952. No. 1052. p. 180.

/ 189 /

/ 190 /

Captulo 8 / Chapter 8

La normativa y los estndares


de calidad como garanta
de competitividad
Sandra Milena Vsquez Meja*
Claudio Jimnez Cartagena**

Resumen

Magster en Ciencia y Tecnologa de Alimentos. Decana


Facultad de Ciencias Administrativas y Agropecuarias,
Corporacin Universitaria
Lasallista. ntegrante del Grupo de nvestigacin en Produccin, Desarrollo y Transformacin Agropecuaria.

** Doctor en ngeniera. Magster en Ciencias Bsicas Biomdicas. Docente y director


de Grupo de nvestigacin
Aplicada al Medioambiente
GAMA- Corporacin Universitaria Lasallista.
Correspondencia:
Sandra Milena Vsquez Meja

[email protected]
Claudio Jimnez Cartagena
[email protected]

El presente captulo tiene como propsito referenciar la normativa y los sistemas de gestin de calidad
(SGC) aplicables al sector de ctricos de Colombia y
de pases de intercambio comercial; adems, se ilustran
las exigencias que se hacen a las empresas productoras
y procesadoras de jugos ctricos (zumos), y relaciona
esa normativa con la aplicacin de la trazabilidad, el
monitoreo de los lmites mximos de residuos (LMR)
y el acceso a mercados internacionales como requisitos
bsicos de la competitividad. A partir de este panorama, se pretende revisar e identificar las dificultades
actuales del sector y sus oportunidades.
Palabras clave: ctricos, trazabilidad, gestin de la calidad, lmites mximos de residualidad.
Regulation and quality standards
as a competitiveness guarantee
Abstract
This chapter aims to provide a reference of the regulations and the quality management systems applicable
to the citrus sector in Colombia and in countries with
which there is a commercial trade. Also, the demands
made to citrus juices producers and processors are
/ 191 /

Sandra Milena Vsquez Meja, Claudio Jimnez Cartagena

shown and the regulations are correlated with the traceability, the monitoring of the maximum waste limits and the access to international
markets as basic requirements for competitiveness. From that scope,
the idea is to revise and identify the current difficulties the sector has,
and its opportunities.
Key words: citrus, traceability, quality management, maximum waste
limits.

ntroduccin
Las empresas del sector agroindustrial requieren de arduos y constantes esfuerzos para mantenerse competitivas. Uno de sus retos actuales es presentar en
los mercados internacionales productos y procesos empresariales diferenciados
e innovadores para sus consumidores, que incrementen su valor econmico y
su reconocimiento1. Esta necesidad de ofrecer productos diferenciados genera
cambios importantes en la forma como las empresas del sector agroalimentario
se comunican, producen, agregan valor a los productos e interpretan las necesidades de sus clientes; de esta forma, se ven obligadas a implementar sistemas de
gestin de calidad (SGC) que permitan no solo controlar la calidad del producto
y del proceso sino tambin gestionar la empresa para un desarrollo en los mbitos comerciales y administrativos, garantizando su competitividad en el tiempo.

Contexto de la calidad en el sector agroalimentario


La calidad agroalimentaria juega un papel fundamental en la comercializacin y se convierte en un instrumento estratgico para mejorar las utilidades
de los empresarios del sector. La complejidad de los procesos de produccin
agrcola y la necesidad de las empresas de dar valor agregado a sus productos
y servicios obligan a los empresarios a usar procedimientos de normalizacin
y control de calidad en lo referente tanto al producto como a los procesos.
El concepto de calidad es de difcil definicin en el mbito agroalimentario
porque encierra numerosos requisitos tanto desde los clientes como desde la legislacin. Algunos autores han definido la calidad agroalimentaria como un juicio de
tipo multivariable emitido por el consumidor, es decir, es una ordenacin de preferencias de varias marcas o productos que cumplen sus expectativas2. Por su parte,
la norma ISO 8402 define la calidad como un conjunto de propiedades y carac/ 192 /

La normativa y los estndares de calidad como garanta de competitividad

tersticas de un producto o servicio que le confieren su aptitud para satisfacer unas


necesidades expresas o implcitas. Lo cierto es que, actualmente, la calidad debe ser
percibida desde varios aspectos empresariales para satisfacer las necesidades de los
clientes; es as como hablamos de cumplimiento de las necesidades y expectativas
de los consumidores (valor nutricional, grado de conservacin, caractersticas sensoriales, caractersticas fsico/qumicas, servicio, precio, aptitud, entre otras) y del
cumplimento de normativa, higiene y seguridad (inocuidad e idoneidad).
Segn lo anterior, cada producto derivado del sector agroalimentario, entre
ellos los ctricos y productos obtenidos a partir de estos, debe cumplir unos
requisitos para poder ser comercializados con xito, y acatar la legislacin para
ser aceptados por los clientes.

Normativa para la produccin, transformacin y comercializacin de ctricos


Las normas de calidad que regulan la actividad agroalimentaria pueden
clasificarse en tres grandes grupos:
Las normas de derecho alimentario, que incluyen disposiciones
para proteger la salud del consumidor. En los ltimos aos, el mercado de alimentos, en general, y los consumidores, en particular,
han adoptado una poltica proteccionista en sentido de velar por su
salud a partir de la calidad de los alimentos que consumen y dentro
de esta poltica, en forma implcita pero esencial, la inocuidad se
refleja como principio fundamental para el consumo. Este aspecto
tambin ha sido considerado por diferentes instituciones y entidades privadas y gubernamentales que, sumadas a mercados globales,
ven en la inocuidad de alimentos un objetivo indispensable para el
expendio de productos seguros y que no afecten la salud de los consumidores3. En este sentido se han creado normas internacionales
y nacionales para garantizar la inocuidad de los alimentos como las
buenas prcticas de manufactura (BPM) reglamentadas en cada pas
acogindose a las consideraciones del Codex Alimentarius.
Las normas comunes de comercializacin, que tienen como objetivo eliminar del mercado productos con calidad deficiente y facilitar
los intercambios intracomunitarios, teniendo en cuenta la evolucin
del mercado y de las prcticas comerciales. Estas normas pretenden
mejorar la calidad de los productos, facilitando as su comercializacin, tanto en beneficio de los productores como de los consumidores.
/ 193 /

Sandra Milena Vsquez Meja, Claudio Jimnez Cartagena

Las normas ambientales, que procuran dar buen uso a los recursos ambientales tanto en su adecuada utilizacin como en la
recuperacin de materiales de empaque y el control de las aguas
residuales buscando un equilibrio entre la reduccin de los impactos
en el medioambiente y la rentabilidad de la empresa. Asimismo, la
normativa medioambiental busca que las empresas agroalimentarias
hagan una declaracin de respeto a la naturaleza y a la sociedad, considerando estas relaciones de armona como la base para un desarrollo empresarial sostenible. Especficamente las normas ISO 14000
orientan la gestin de las empresas, en aquella faceta que relaciona a
la organizacin con su entorno4.
Muchas de estas normas son creadas teniendo como referente las normas
del codex alimentarius. La comisin del codex alimentarius fue creada en
1960 por la Organizacin Mundial de la Salud (OMS) y la Organizacin de
las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentacin (FAO) para convertirse en un punto de referencia mundial para los consumidores, los productores y elaboradores de alimentos, los organismos nacionales de control de
los alimentos y el comercio alimentario internacional. Su repercusin sobre
el modo de pensar de quienes intervienen en la produccin y elaboracin de
alimentos y quienes los consumen ha sido enorme. Su influencia se extiende
a todos los continentes y su contribucin a la proteccin de la salud de los
consumidores y a la garanta de unas prcticas equitativas en el comercio alimentario es incalculable5.
El Codex Alimentarius brinda a todos los pases la oportunidad de unirse
a la comunidad internacional para concertar las normas alimentarias y participar en su aplicacin a escala mundial, y se considera el punto internacional
de referencia ms importante para los adelantos asociados con las normas
alimentarias.

Legislacin nternacional para la produccin, transformacin y


comercializacin de ctricos
Como se mencion anteriormente, la seguridad en el consumo de alimentos
es un tema de fundamental importancia para todos los pases, razn por la cual
varios departamentos y agencias gubernamentales han desarrollo una extensa
red de legislacin y de procedimientos encaminados a mejorar la calidad de los
productos ofrecidos al consumidor. La legislacin en alimentos es desarrollada y
aplicada por distintas dependencias gubernamentales en cada pas.
/ 194 /

La normativa y los estndares de calidad como garanta de competitividad

En lo que corresponde al sector agropecuario en los Estados Unidos, el


responsable directo es Departamento de Agricultura de los Estados Unidos
(USDA) y la Agencia para la Administracin de Medicamentos y Alimentos
(FDA), encargados de velar por la seguridad en el consumo de todos los alimentos, cosmticos, medicamentos, y productos biolgicos, y radiolgicos,
y vigilar el cumplimiento de la Ley contra el Bioterrorismo, cuyo objetivo
es prevenir la contaminacin de alimentos, productos animales, vegetales y
medicamentos.
En la tabla 1 se presenta un resumen de las principales actividades de cada
una de estas agencias de control.
Tabla 1. Principales actividades
de las agencias de control Sanitario en los EEUU
Agencia

Adscrita a

Actividades

Programa

APHIS

USDA

Regular la importacin y exportacin


de plantas, animales y ciertos productos agropecuarios,

PPQ

FSIS

USDA

Garantizar la seguridad en el consumo


de productos crnicos

HACCP

FGIS

USDA

Servicio de Comercializacin Agrcola

AMS

USDA

Centro para la
Seguridad Alimentaria y la Nutricin
Aplicada

CFSAN

FDA

Agencia de Proteccin Ambiental

EPA

FDA

Servicio de Inspeccin Sanidad Animal


y Vegetal
Servicio de Inocuidad e Inspeccin de
los Alimentos
Servicio de Inspeccin Federal de
Granos

Siglas

Desarrollar estndares de calidad y


procedimientos para la comercializacin interna y externa de granos
Asegurar la calidad de los alimentos
ofrecidos a los consumidores as como
las prcticas comerciales justas.
Encargada de asegurar que los alimentos sean seguros, nutritivos y saludables, as como que sean correctamente
etiquetados.
Coordina la accin gubernamental a
favor del medio ambiente y regulacin de pesticidas.

HACCP

USDA: Departamento de Agricultura de los Estados Unidos.


HACCP: Sistema de Anlisis de Peligros y de Puntos Crticos de Control
PPQ: Programa de Proteccin y Cuarentena Vegetal.
Fuente: Recopilacin propia

Las agencias mencionadas han desarrollado numerosos instrumentos legales:


t Federal Food, Drug and Cosmetic Act (Ley Federal de Alimentos, Drogas
y Cosmticos)
/ 195 /

Sandra Milena Vsquez Meja, Claudio Jimnez Cartagena

t Animal Welfare Act (Ley de Proteccin de los Animales)


t Federal Insecticide, Fungicide, and Rodenticide Act (Ley Federal de Insecticidas, Fungicidas y Raticidas)
t Federal Seed Act (Ley Federal de Semillas)
t Plant Protection Act (Ley de Proteccin Vegetal)
t Federal Meat Inspection Act (Ley Federal de Inspeccin de Carnes)6
En Europa, la legislacin aplicable al sector de alimentos es muy amplia.
La asociacin de industrias de jugos y nctares de frutas y vegetales de la Comunidad Econmica Europea public en 1993 una compilacin de prcticas
para la elaboracin de jugos de frutas y vegetales7, y posteriormente la comisin del Codex Alimentarius public en 2005 la Norma general del Codex
para zumos (jugos) y nctares de fruta8 en la cual se dan las definiciones de
cada producto, se definen los factores esenciales de composicin y calidad, los
aditivos permitidos durante la elaboracin, los contaminantes, la higiene y las
normas de etiquetado.
Asimismo, el Codex public en 1993 la norma para muestreo de residuos
de plaguicidas que permite realizar un control sobre los productos agroindustriales como los ctricos para evitar la presencia de pesticidas9 y actualmente
existe una base de datos en lnea sobre los residuos de plaguicidas en los alimentos en la cual se puede consultar la lista de plaguicidas, clases funcionales,
los LMR del Codex para los plaguicidas y los lmites mximos para residuos
extraos (LMRE) adoptados por la Comisin del Codex Alimentarius10.
Otras normativas europeas vigentes sobre seguridad alimentaria son:
t Reglamento del Parlamento Europeo (CE) 178/2002 y del consejo de 28 de
enero de 2002. Por el que se establecen los principios y requisitos generales
de la legislacin alimentaria, y se crea la autoridad europea de seguridad alimentaria y se fijan procedimientos relativos a la seguridad alimentaria.
t Real Decreto 1801de 2003 sobre seguridad general de los productos (B.
O. E 10.01.2004).
t Reglamento del parlamento Europeo (C. E.) N 852 de 2004 y del consejo de
29 de abril de 2004. Referente a las normas especficas de higiene de alimentos.
t Reglamento del Parlamento Europeo (CE) 2073/2005, de 15 de noviembre de 2005, relativo a los criterios microbiolgicos aplicables a los productos alimenticios.
/ 196 /

La normativa y los estndares de calidad como garanta de competitividad

t Reglamento (CE) 1799/2001 del 12 de septiembre de 2001 por el que se


establecen las normas de comercializacin de los ctricos.
Como se puede observar, muchos pases han desarrollado legislaciones rigurosas sobre los productos agroalimentarios. Estas regulaciones cubren por
supuesto la produccin de frutas, el procesamiento, la composicin de los
jugos de frutas y el etiquetado. Aunque continuamente se busca la forma de
armonizar la legislacin entre diferentes bloques comerciales para facilitar la
produccin y el comercio de jugo, todava existen diferencias significativas
entre las regulaciones. Por ejemplo: en la Unin Europea (EU) y la mayora de
otros pases, el trmino de jugo de naranja es usado solo para el jugo extrado
de naranjas dulces de la variedad citrus sinenesis, mientras que en los Estados
Unidos de America (USA) se permite hasta un 10% de mandarina o hbridos
de mandarina /naranja11.

Normativa nacional para la produccin, transformacin y comercializacin de ctricos


Como en muchos pases, en Colombia la empresa agroalimentaria es intervenida por parte del gobierno nacional con la finalidad de garantizar aspectos
bsicos como la salud y la correcta informacin al consumidor. El Ministerio
de la Proteccin Social es el organismo gubernamental encargado de crear diversas normas de obligatorio cumplimento para los alimentos y delega al Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (INVIMA) y al
Instituto Colombiano agropecuario (ICA) para la vigilancia y control de estas.
En el pas, se establecieron cinco documentos del Consejo Nacional de
Poltica Econmica y Social-CONPES orientados a garantizar la poltica nacional de sanidad agropecuaria e inocuidad de alimentos para las cadenas de
carne bovina y leche, aves y porcinos, frutas y otros vegetales. Los anteriores
documentos han permitido fortalecer las entidades sanitarias del pas y consolidar el sistema de medidas sanitarias y fitosanitarias a travs de una adecuada definicin de competencias, del mejoramiento de su capacidad cientfica,
tcnica y administrativa, y una eficiente coordinacin interinstitucional, para
garantizar tcnicamente los requerimientos del comercio internacional.
Los documentos CONPES, estn enmarcados dentro del plan nacional
de desarrollo; el documento CONPES 3375 orienta la informacin bsica
relacionada con el sector citrcola y contiene los lineamientos que permitirn
mejorar sus condiciones fitosanitarias y la inocuidad de la produccin horto/ 197 /

Sandra Milena Vsquez Meja, Claudio Jimnez Cartagena

frutcola con el fin de proteger la salud y la vida de las personas, aumentar la


competitividad y fortalecer la capacidad para introducir los productos en los
mercados internacionales.
Bsicamente, el sistema nacional de medidas sanitarias y fitosanitarias
acompaa el proceso de introduccin de un producto nacional en los mercados internacionales mediante los servicios de inspeccin, vigilancia y control
sanitario del ICA y del INVIMA. Cabe destacar que la poltica no solo est
orientada a satisfacer la necesidad del comercio internacional, sino que, adicionalmente, pretende proteger la salud y la vida de los consumidores, fortalecer los procesos de inspeccin, vigilancia y control como estrategia de mejoramiento continuo, usar adecuada y responsablemente los insumos agrcolas
y mejorar la competitividad del pas en cuanto a residuos de plaguicidas y
otros contaminantes, entre otros. El ICA para el 2008 ejecut el plan nacional
para el control y la erradicacin de la mosca de la fruta, y para el 2012 tiene
por meta establecer 5 reas de baja prevalencia de plagas. De igual forma, se
propuso un plan a 4 aos para el establecimiento de LMR de plaguicidas, para
6 tipos de frutas y otros vegetales; sin embargo, para diciembre de 2009 se
esperaba que el pas contara con un sistema de inspeccin, vigilancia y control
para plaguicidas, fortalecido para las etapas de produccin, transporte, comercializacin y uso responsable de plaguicidas, fertilizantes y bioinsumos; pero
an su funcionalidad es limitada.
En el mismo sentido, desde el ao 1997 la legislacin colombiana ha buscado mejorar las condiciones de procesamiento y distribucin de los alimentos estableciendo los siguientes decretos y resoluciones que aplican para los
alimentos, incluidos los ctricos, jugos y derivados de ctricos que se producen, transforman y comercializan en el pas:
Decreto 3075 de 199712: en el cual se determinan las condiciones bsicas
de higiene en la fabricacin de alimentos, estableciendo la aplicacin de las
BPM, entendidas como los principios bsicos y prcticas generales de higiene en la manipulacin, fabricacin, envasado, almacenamiento, transporte y
distribucin de alimentos para consumo humano, con el objeto de garantizar
que los productos se fabriquen en condiciones sanitarias adecuadas y se disminuyan los riesgos inherentes a la produccin.
La aplicacin del decreto genera transformaciones profundas en las empresas actuales de alimentos las cuales deben cumplir con condiciones especficas
que garanticen la inocuidad de los alimentos mediante requisitos de las instalaciones, los equipos y utensilios, el personal manipulador, las condiciones de
/ 198 /

La normativa y los estndares de calidad como garanta de competitividad

fabricacin, la aplicacin de programas de saneamiento bsico, de programas


complementarios y de un sistema de aseguramiento y control de la calidad.
Adems, este decreto establece los parmetros para la vigilancia y control de
las plantas de alimentos por parte del INVIMA, la obtencin del registro sanitario y las condiciones bsicas de importacin y exportacin de alimentos.
Finalmente, el decreto se refiere a las medidas sanitarias de seguridad y a las
sanciones a las empresas que no cumplen con lo estipulado en l.
La mayor ventaja en la aplicacin de las BPM es la estandarizacin de todos los procedimientos relacionados con la manipulacin de alimentos bajo
condiciones inocuas para evitar la contaminacin de estos y crear registros
que, usados de forma pertinente, permitan conocer el comportamiento de
los procesos, los consumos de materias primas e insumos, el control de los
proveedores, el monitoreo constante de los manipuladores, adems de tener
un soporte documentado que respalde todas las actividades de las plantas procesadoras y evidencie su compromiso por ofrecer productos seguros.
Resolucin 7992 de 199113: Por la cual se reglamenta la elaboracin, conservacin y comercializacin de jugos, concentrados, nctares, pulpas, pulpas
azucaradas y refrescos de frutas. Esta reglamentacin abarca todo lo referente
a las caractersticas fsicas, qumicas, microbiolgicas de los productos mencionados, permite diferenciar unos productos de otros segn estas caractersticas y el contenido de fruta en el producto final y, finalmente, hace claridades
importantes sobre el rotulado y vida til aproximada de estos alimentos. Los
productores de jugos de fruta pueden consultar esta normativa para establecer
los parmetros mnimos de sus productos y asegurarse de que los cumplan.
Los parmetros monitoreados para las frutas en esta resolucin son similares a los propuestos por otros investigadores14 para monitorear la calidad de
los ctricos y tambin coinciden con los propuestos por el codex para los jugos
de frutas15.
Decreto 60 de 200216, en el cual se promueve la aplicacin del Sistema de Anlisis de Peligros y Puntos de Control Crtico (HACCP)* en las
fbricas de alimentos, y se reglamenta el proceso de certificacin. Este es
un sistema que identifica, evala y controla los peligros que son significativos para la inocuidad de los alimentos17. Adicionalmente, el sistema ofrece
un enfoque documentado y verificable para la identificacin de peligros,
____________________________________________
*

HACCP: de su sigla en ingls hazard analysis and critical control points. En espaol significa anlisis de
peligros y puntos crticos de control

/ 199 /

Sandra Milena Vsquez Meja, Claudio Jimnez Cartagena

medidas preventivas, y control de estos en puntos determinados, para la


puesta en marcha de un sistema de monitoreo; se enfoca en riesgos fsicos,
qumicos y microbiolgicos que pueden contaminar el alimento y se realiza
sistemticamente sobre cada materia prima, cada insumo adquirido y cada
etapa del proceso productivo18.
El sistema HACCP puede aplicarse a lo largo de toda la cadena alimentaria, desde el productor primario hasta el consumidor final, y su aplicacin deber basarse en pruebas cientficas de peligros para la salud humana. Adems
de mejorar la inocuidad de los alimentos, la aplicacin del sistema de HACCP puede ofrecer otras ventajas significativas como facilitar la inspeccin por
parte de las autoridades y promover el comercio internacional al aumentar la
confianza en la inocuidad de los alimentos19.
Cada vez, es mayor la necesidad del sector agroalimentario y del gobierno
de integrar la legislacin y los alimentos a los programas de garanta de calidad, usando o proponiendo el sistema HACCP como un sistema de aseguramiento de la calidad aplicable a todas las cadenas alimentarias, para eliminar
los vacos y debilidades que se encuentran en los sistemas de monitoreo y
control de los productos20, 21.
En Colombia, para el ao 1991, el Codex Alimentarius promovi la implementacin del sistema HACCP, con el objetivo de garantizar la inocuidad
de los alimentos22 y en el ao 2002 con la publicacin del Decreto 6023 se
empieza a promover su aplicacin como sistema de aseguramiento de la inocuidad. Actualmente, su aplicacin es de obligatorio cumplimiento en las empresas del sector crnico, lcteo y pesquero del pas. La aplicacin del sistema
HACCP requiere la previa implementacin de las BPM y su mayor dificultad
radica en el mantenimiento adecuado de los procedimientos operativos estndar de saneamiento (POES), en la falta de experiencia para identificar los
puntos crticos de control (PCC) y en la adecuada deteccin de las desviaciones presentadas en los mismos.
Teniendo en cuenta que en todos los procesos de produccin se presentan
variaciones inevitables ya sea por fallas en los equipos, cambios en el ambiente,
cambios de personal o de las formulaciones del producto, se puede concluir
que la efectividad del control en los PCC del sistema HACCP depender de
la fiabilidad y exactitud del sistema de vigilancia acoplado y si hay equipos de
control o monitoreo poco sensibles y se presentan desviaciones del proceso no
detectadas, puede verse afectada en gran medida la seguridad de los alimentos
que se procesan24.
/ 200 /

La normativa y los estndares de calidad como garanta de competitividad

Las empresas pioneras en la implementacin de HACCP en Colombia


son aquellas dedicadas a la exportacin; sus mayores costos son los tiempos
requeridos por el personal para la documentacin del sistema y las pruebas
microbiolgicas para poder evidenciar que los controles son adecuados. El
mayor beneficio de este sistema de inocuidad es la disminucin de recuentos
microbianos en los productos que estn directamente relacionados con su deterioro y contaminacin25; adems, el HACCP al igual que otros sistemas de
gestin de la calidad (SGC), se ajusta a muchas exigencias de pases europeos
y norteamericanos y es compatible con las normas ISO por lo que se puede
implementar de forma conjunta.
El sistema HACCP se convierte, entonces, en una estrategia competitiva
para las empresas del sector citrcola que quieran garantizar la seguridad de los
alimentos producidos y procesados, y que pretendan exportar.
Resoluciones de Etiquetado: con el compromiso de mantener informado
al consumidor sobre la composicin de los alimentos y sus aportes nutricionales y prevenir prcticas que puedan inducir a error a los consumidores,
Colombia se ha acogido a la normativa internacional y a algunos acuerdos
comerciales como el Acuerdo sobre Obstculos Tcnicos al Comercio26. Para
su aplicacin en el pas, el Ministerio de la Proteccin Social ha establecido la
Resolucin 5109 de 200527 en la cual se fijan los requisitos de rotulado o etiquetado general que deben cumplir los alimentos envasados y materias primas
de alimentos para consumo humano, y la Resolucin 0333 de 201128 en la
cual se determinan los requisitos de rotulado nutricional que deben cumplir
los alimentos envasados para consumo humano.

Normas comunes de comercializacin, aplicadas en los mbitos


nacional e internacional:
Es necesario precisar que en la actualidad la legislacin alimentaria ha
dejado de ser el nico referente de calidad para los productos agroalimentarios; tambin se deben tener en cuenta las normas exigidas por el cliente
para el consumo y la comercializacin de ciertos productos, es decir, la
legislacin de calidad hace referencia a los estndares mximos y mnimos
que debe cumplir el producto; pero stos no son el nico referente para
definir si un producto ser aceptado en el mercado y si la empresa es competitiva, pues la gestin de la calidad de una empresa debe estar centrada
en el consumidor.
/ 201 /

Sandra Milena Vsquez Meja, Claudio Jimnez Cartagena

Actualmente, toda empresa debe estar normalizada, es decir, debe establecer especificaciones y documentos que prescriban las exigencias con las cuales
el producto, el servicio y la propia empresa deben estar conformes. Estas normas, al igual que las legales, tambin debern ser verificadas y auditadas por
la propia empresa y, en casos de certificacin, requieren de una auditora de
terceros en la que se constate que las acciones de la organizacin se acercan a
las polticas definidas en su sistema de gestin de calidad.
Dentro de las normas comunes aplicables internacionalmente al sector de
ctricos y en general a la agroindustria en el mundo podemos mencionar:

Buenas Prcticas Agrcolas (BPA):


Tanto en la produccin primaria como en los procesos de transformacin,
pueden ser introducidos riesgos qumicos, biolgicos y fsicos, que pueden
deteriorar la inocuidad del producto final, es decir, la cualidad de no causar
dao y afectar la salud de los consumidores.
Los principales peligros ligados a la produccin primaria de alimentos
de origen vegetal son los microorganismos patgenos y deteriorantes, las
plagas, los residuos de plaguicidas, las micotoxinas, los metales pesados, los
organismos genticamente modificados y, en algunos casos, los adulterantes, todos ellos asociados al uso de agua contaminada, los abonos orgnicos
y los trabajadores.
La reduccin de estos riesgos supone una clara identificacin y anlisis
de estos, as como de sus posibles fuentes y su impacto, con el fin de definir
las mejores estrategias de prevencin a aplicar. Para ello, se han desarrollado
esquemas de BPA como sistemas de aseguramiento de la inocuidad, los cuales
renen las condiciones y prcticas operativas recomendadas para asegurar la
inocuidad, la proteccin ambiental y el bienestar de los trabajadores, con un
enfoque preventivo aplicado a toda la cadena. Actualmente, la implementacin de las BPA ha pasado de enfocarse solo en el producto final para abarcar
aspectos de calidad empresarial como el control de las caractersticas del proceso, la sostenibilidad y bienestar de los trabajadores29, 30.
En relacin con la inocuidad y la proteccin ambiental, las BPA hacen especial nfasis en el control de los problemas fitosanitarios del cultivo bajo los
principios del Manejo Integrado31. Las BPA se consideran como una forma
especfica de producir o procesar productos agropecuarios, cumpliendo con
requerimientos especficos de produccin limpia.
/ 202 /

La normativa y los estndares de calidad como garanta de competitividad

En el mismo sentido, la FAO ha desarrollado una serie de principios enfocados a aplicacin de BPA referentes al uso del suelo, el agua, cultivos y
produccin forrajera, proteccin de las plantas, produccin animal, cosecha,
procesamiento y almacenamiento de explotaciones agrcolas, conservacin de
la energa y manejo de los desechos, bienestar, salud y proteccin de los trabajadores, flora y fauna silvestre32, orientando con estos principios a las empresas
que quieren acogerse a la aplicacin de estas normas.
Desde 2003 la FAO ha estado realizando una serie de estudios, consultas de
expertos y actividades en los pases relacionados con las BPA, concentrndose
en el suministro de informacin, asistencia tcnica y creacin de capacidad para
ayudar a que los pases en desarrollo hagan frente a la globalizacin de los sistemas alimentarios y a la proliferacin de normas sobre BPA. Para este fin, se han
desarrollado una serie de documentos, polticas, estudios de antecedentes, manuales de capacitacin y bases de datos que pueden encontrarse en la direccin
de Internet: http://www.fao.org/prods/gap/resources/resources_es.htm
Para muchos pases, principalmente en la EU, las BPA son una exigencia tcita
que no tiene precedentes; es as, como GLOBAL GAP siendo un organismo privado que establece normas voluntarias para certificar productos agrcolas, se ha convertido en la organizacin ms grande en el mundo, reconocida por la instauracin
de normas para los productos agropecuarios que se quieren comercializar en muchos mercados europeos. En este caso, vemos claramente cmo el consumidor y las
organizaciones privadas destinadas a defender los derechos del cliente son quienes
estn imponiendo las reglas de comercializacin, y la legislacin se acomoda en
muchos casos a estas reglas al reconocer la importancia de la salud del consumidor.
Sin duda alguna, el sistema de aseguramiento de la calidad e inocuidad
mediante la aplicacin de las BPA constituye el punto de partida con fines
preventivos a lo largo de la cadena productiva para disminuir los riesgos qumicos y biolgicos en frutas y otros vegetales.
En Colombia, el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural (MADR), a partir del ao 2002, gener el plan nacional de implementacin de BPA en coordinacin con un grupo intergremial, que an se encuentra en proceso de maduracin.
Sin embargo, en el pas hay diferentes entidades que han soportado la implementacin de las BPA. Instituciones como el Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA),
el Instituto Interamericano de Cooperacin para la Agricultura (IICA), la Asociacin Hortifrutcola de Colombia (ASOHOFRUCOL), la Cmara de Comercio
de Bogot (CCB), la Gobernacin de Cundinamarca y la Asociacin Nacional de
Comercio Exterior (ANALDEX), entre otras instituciones, iniciaron desde el ao
/ 203 /

Sandra Milena Vsquez Meja, Claudio Jimnez Cartagena

2002 programas de apoyo a la produccin de frutas exportables en Boyac, Antioquia y Cundinamarca, para la implementacin del protocolo EUREPGAP.
En Colombia, hasta la fecha, las BPA siguen siendo normas comunes de
comercializacin que cada vez se vuelven necesarias, pero que an no son exigidas en todos los mercados. En la ltima dcada se ha puesto de manifiesto
que los productos Verdes o ecolgicos son una exigencia cada vez ms clara
de los consumidores, y las empresas del pas que quieren permanecer competitivas deben acogerse a estos sistemas de produccin limpia que garanticen la
ausencia de riesgos qumicos en los productos, como pesticidas y herbicidas.
En este sentido se vuelve cada vez ms necesario establecer sistemas de
monitoreo de LMR y se ha desarrollado gran informacin al respecto que
ampliaremos a continuacin:
Lmite mximo para residuos de plaguicida: el lmite mximo de residuos de
plaguicidas es definido como la concentracin mxima de residuos de un plaguicida (en mg/Kg), permitida legalmente para el uso en la superficie o en el interior
del producto alimenticio destinado al consumo y de piensos de uso en animales.
Los LMR tienen como objetivo lograr que los alimentos frescos o productos procesados sean toxicolgicamente tolerables, con el fin de proteger la salud humana
y animal; de igual manera, se constituyen en un documento oficial de los Estados
miembros ante la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA).
Los LMR estn asociados a la aplicacin de las BPA y son obtenidos mediante
estimaciones efectuadas en las Reuniones Conjuntas FAO/OMS sobre Residuos
de Plaguicidas (JMPR), despus de obtener la evaluacin toxicolgica del plaguicida y su residuo, y el anlisis de los datos de residuos obtenidos en ensayos y usos
controlados. En el anlisis se incluyen datos de ensayos para el peor de los casos, lo
cual est asociado a la determinacin de la concentracin ms elevada recomendada, autorizada o registrada en el pas. Para que las variaciones introducidas en los
requisitos nacionales de control de plagas, sean tenidas en cuenta, se debe incluir
la ingesta diaria admisible (IDA) para garantizar que los alimentos que se ajustan
a los LMR del Codex son seguros e inocuos para el consumo humano.
A continuacin se definen los siguientes conceptos, resaltando su importancia:
Ingestin diaria admisible (IDA): la IDA de una sustancia qumica es la
dosis diaria que, ingerida durante todo el perodo de vida, no genera riesgos
apreciables para la salud del consumidor, a partir de la evaluacin de la sustancia referenciada por JMPR; es expresada en miligramos de sustancia qumica
por kilogramo de peso corporal33.
/ 204 /

La normativa y los estndares de calidad como garanta de competitividad

Ingestin diaria tolerable provisional (IDTP): este valor es obtenido a


partir de datos toxicolgicos e incorpora la ingestin humana tolerable de
un plaguicida utilizado previamente en la produccin agrcola y que aparece
como residuo en el alimento, en el agua potable y en el ambiente34.
Ingestin diaria admisible temporal (IDAT): es entendida como la dosis
de ingestin diaria admisible establecida para un tiempo especfico, con objeto de obtener datos bioqumicos y toxicolgicos, necesarios para estimar una
IDA, y bajo la aplicacin de un factor de seguridad ms amplio.
Los lmites mximos del Codex para residuos son indicadores del uso de
plaguicidas de conformidad con las BPA, las cuales varan notablemente de
una regin a otra debido a la diversidad de plagas y a los procesos comerciales; adicionalmente, expresan la concentracin de residuos inmediatamente
despus de la cosecha, y llegan a ser superior a los niveles de residuos que se
encuentran registrados en los sistemas nacionales de vigilancia. Estos se establecen slo cuando se tienen pruebas de inocuidad para los seres humanos.
La EU armoniz los LMR aplicables a los diferentes productos de alimentacin
humana o animal, y fij un lmite mximo aplicable por defecto; en el CE 396/2005
del Parlamento Europeo y del Consejo, de 23 de febrero de 2005, se fijaron las cantidades mximas autorizadas de residuos de plaguicidas que pueden encontrarse en
los productos de origen animal o vegetal destinados al consumo humano o animal
con el objetivo de garantizar que dichos residuos presentes en los alimentos no constituyan un riesgo inaceptable para la salud de los consumidores y los animales.
De igual forma, fuera de definir los lmites especficos, se defini el lmite por
defecto de 0,01mg/Kg para los casos en que no se haya fijado un LMR de forma
especfica para un producto o un tipo de producto. Es importante aclarar que
existen productos para los que se definen lmites provisionales, entre los cuales
se destacan la miel o las infusiones, algunos productos fitosanitarios y los nuevos
productos, teniendo en cuenta que es prohibido acudir a estrategias de dilucin.
En el caso particular de que el producto de origen citrcola est destinado a la
obtencin de principios activos fitoteraputicos y en especial para fitosanitarios,
las sustancias activas para su comercializacin, de acuerdo con la Directiva de la
Comunidad Econmica Europea 91/414/CEE, deben someterse a una inspeccin para determinar el umbral lmite por encima del cual su concentracin en
los productos alimenticios puede determinar riesgo para las personas o los animales. Cabe destacar que en la normativa previa a la Directiva 91/414/CE, cada
pas miembro defina sus propios lmites mximos de contenido de plaguicidas
/ 205 /

Sandra Milena Vsquez Meja, Claudio Jimnez Cartagena

para cada tipo de producto: frutas y hortalizas (Directiva 76/895/CEE), cereales


(Directiva 86/362/CEE), productos de origen animal (Directiva 86/363/CEE)
y productos de origen vegetal, incluidas frutas y hortalizas (Directiva 90/642/
CEE). En la tabla 2 se muestran los LMR en mg/Kg vigentes para los ctricos
de acuerdo con la normativade la Unin Europea.
Tabla 2. Lmites mximos de residuos de pesticidas (mg/Kg)
y otros compuestos en ctricos para la Unin Europea
Plaguicida
2,4 D
Abamectina
Acetamiprid

LMR Plaguicida

LMR

Plaguicida

LMR

Clofentezin

0,5

Fenarimol

0,02

0,01

Clormecuat

0,05

Fenazaquin

0,2
0,02

Clortal dimetil

0,01

Fenbuconazol

Acibenzolar S metil

0,02

Clortalonil

0,01

Fenbutatin oxido

Acrinatrin

0,02

Clortiamida

0,2

Fenhexamida

0,05

alfa-Cipermetrin

Daminozida

0,02

Fenmedifan

0,05

Aloxidim

0,01

Deltametrin

0,05

Fenotiocarb

Amitrol

0,01

Diazinon

0,01

Fenoxicarb

Anhidrido sulfuroso

0,2

Diclobenil

0,05

Fenpiroximato

0,3

Azinfos metil

0,05

Diclobutrazol

0,05

Fenpropatrin

Azociclotin (cihexatin)

0,2

Diclofluanida

Fenpropimorf

0,05

Azoxiestrobina

Dicloran

Fention

Benalaxil

0,05

Dicofol

Fentoato

Benomilo

0,5

Dietofencarb

0,05

Fenvalerato

0,02

Benzoximato

Difenamida

0,05

Flazasulfuron

0,02

Beta-ciflutrin

0,02

Difenilamina

0,05

Florasulam

0,01

Bifenilo

70

Difenoconazol

0,02

Flubenzimina

0,01

Bifentrin

0,1

Diflubenzuron

Fludioxonil

0,05

Bioresmetrin

0,1

Dimetoato

0,02

Flufenoxuron

0,3

Bitertanol

0,05

Dimetomorf

0,02

Fluquinconazol

0,05

Diniconazol

0,05

Flusilazol

0,01

tau-Fluvalinato

Bromopropilato
Bromuro de metilo

0,05

Dinocap

0,1

Bromuro inorganico

30

Ditianona

Folpet

0,02

Formetanato

0,05
0,02

Bupirimato

0,05

Ditiocarbamatos

Buprofezin

0,2

Diuron

0,3

Formotion

Dodina

0,2

Fosalon

Butocarboxim
Butralina

0,1

Endosulfan

0,05

Fosetil-Al

Captan

0,02

Espiroxamina

0,05

Fosmet

/ 206 /

La normativa y los estndares de calidad como garanta de competitividad

Carbaril

0,05

Etefon

Carbendazima

0,5

Etiofencarb

0,05

Fostiazato

0,02

Guazatina

Carbofurano

0,3

Etirimol

Ciazofamida

0,01

Etofenprox

Cicloxidim

0,05

Etoxazol

0,1

Hexitiazox

Ciflutrin

0,02

Etoxiquina

0,05

Imazalil

Cihexatin

0,2

Etridiazol

0,05

Imidacloprid

Cimoxanilo

0,05

Etrimfos

0,5

Indoxacarb

0,02

Cipermetrin

Famoxadona

0,02

Iprovalicarb

0,05

Ciproconazol

0,01

Fenamidona

0,02

Isoxation

0,3

Ciprodinil

0,02

Fenamifos

0,02

Kresoxim-metil

0,05

Lufenuron

0,3

Piraclostrobina

Terbumetona

0,05

0,05
1

Hexaconazol

0,02

Hexaflumuron

0,5

Piraflufen etil

0,02

CCl4

0,01

Mepanipirina

0,01

Pirazofos

0,01

Tetraclorvinfos

0,5

Mepicuat Cl

0,05

Piridaben

0,2

Tetraconazol

0,01

Metalaxil

0,5

Piridafention

Metalaxil M

0,5

Pirifenox

Metamidofos

0,01

Pirimetanil

10

Metidation

Piriproxifen

Metiocarb

0,05

Procimidona

Malation

Metoxifenocida

Procloraz

Miclobutanilo

Profoxidim

Milbemectina

0,05

Promecarb

Nitrotal-isopropil

0,05

Propamocarb

Norflurazona

0,1

Propargita

Nuarimol

0,01

Ofurace

0,05

Ometoato

0,02

Ortofenilfenol

0,05

Tetradifon
Tiabendazol

2
5

Tiacloprid

0,02

0,05

Tiametoxam

0,05

0,02

Tiazopir

0,02

10

Tiofanato

0,1

0,05

Tiometon

0,5

Tiram [ 0,1 ]

0,1

0,1

Tolil fluanida

0,05

Triadimefon

0,1

Propiconazol

0,05

Triadimenol

0,1

Quinmerac

0,1

Triclorfon

0,5

Quinoxifen

0,02

Tridemorf

0,05

Quizalofop etil

0,02

Trifloxiestrobina

0,3

Oxadixil

0,05

Resmetrin

0,1

Triflumizol

0,05

Oxamilo

0,01

Spinosad

0,02

Triflumuron

0,05

Oxina de cobre

0,5

CS2

0,05

Triforina

0,05

Paclobutrazol

0,02

Tebuconazol

0,05

Trimetilsulfonio

0,05

Penconazol

0,05

Tebufenocida

Vamidotion

0,05

Pimetrozina

0,3

Tebufenpirad

0,5

Vinclozolina

0,05

Teflubenzuron

0,05

Zoxamida

0,02

Piraclofos

12

Fuente: Recopilacin propia

/ 207 /

Sandra Milena Vsquez Meja, Claudio Jimnez Cartagena

De igual forma, en la tabla 3 se muestran los LMR para ctricos de acuerdo


con USDA.
Tabla 3. Lmites mximos de residuos de pesticidas (mg/Kg)
y otros compuestos en ctricos para los Estados Unidos de Amrica
Plaguicida
2,4 D

LMR

Plaguicida

LMR

Plaguicida

LMR

Diuron

Metalaxil

Acequinocil

0,2

EPTC

0,1

Metidation

Acetamiprid

0,5

Espinetoram

0,3

Napropamida

0,1

Avermectina b1

0,02

Espirodiclofen

0,5

Norflurazona

0,2

Orizalina

0,05

Azinfos metil

Etion

Azoxiestrobina

10

Fenazaquin

Benomilo

10

Fenbuconazol

Bifentrin

0,05

Bromacilo
Buprofezin

0,5

Ortofenilfenol

10

Oxamilo

Fenbutatin oxido

20

Paracuat

0,05

0,1

Fenpiroximato

0,6

Pendimetalina

0,1

2,5

Fenpropatrin

Piraclostrobina

Carbaril

10

Ferbam

Piridaben

0,5

Carfentrazona etil

0,1

Fludioxonil

10

Pirimetanil

10

HCN

50

Fluoridona

0,1

Piriproxifen

0,3

Ciflutrin

0,2

Fosetil-Al

Rimsulfuron

0,01

Setoxidim

0,5

Clorpirifos

Fosmet [ 5 ]

Criolita

Glifosato

0,5

Spinosad

0,3

0,7

Hexitiazox

Diazinon

0,35

Tebufenocida

0,8

Imazalil

10

Tiabendazol

10

0,02

Imidacloprid

0,7

Tiofanato de metilo

0,5

0,1

Lindano

0,5

Trifloxiestrobina

0,3

metanoarsonato

0,35

Trifloxisulfuron

0,03

Trifluralina

0,05

Dicofol

Dicuat
Dimetilamina sal
Dimetilamina jacinto

Fuente: Recopilacin propia

En Colombia, el Instituto Colombiano de Normas Tcnicas (ICONTEC)


dispuso de la Norma Tcnica Colombiana NTC 5400 y de algunas normas de
aplicacin a ctricos especficos (NTC 4085, 4086 Y 4087), sobre BPA para
frutas, hierbas aromticas culinarias y hortalizas frescas, y menciona los requisitos generales y procedimientos que sirven de orientacin a los pequeos,
medianos y grandes productores de estos cultivos. Esta NTC viene siendo
/ 208 /

La normativa y los estndares de calidad como garanta de competitividad

multiplicada por un trabajo conjunto entre el SENA y ASOHOFRUCOL en


24 departamentos en cultivos de frutas, hortalizas y hierbas aromticas, con
el objetivo de certificar productores para la implementacin de stas bajo el
enfoque FAO/OMS, Global GAP, gua de minimizacin de riesgos USA, y
otras especficas del mercado de inters.
A su vez, la Corporacin Colombia Internacional (CCI) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) poseen un convenio que dio origen al proyecto
ColombiaGAP que armonizan el protocolo GlobalGAP y su validacin en
Estados Unidos; se capacita a los trabajadores como multiplicadores de BPA e
inocuidad como modelos piloto en BPA y trazabilidad, para dar cumplimiento con la NTC 5522 que tambin promueve las BPA y es la gua especfica de
trazabilidad en la cadena alimentaria para frutas, hierbas aromticas culinarias
y hortalizas frescas.
En Colombia, la mayora de las empresas de ctricos seleccionan, clasifican, limpian y envasan los productos procesados, lo hacen de forma manual
o semimanual, a travs de mano de obra, lo que introduce altos riesgos de
contaminacin. Adicionalmente, se utilizan ceras, aceites y otras sustancias en
poscosecha de ctricos, cuyo uso se encuentra en proceso de reglamentacin.
Dada la importancia que ha adquirido el tema de presencia de residuos de
plaguicidas en alimentos, los Ministerios de Agricultura y de la Proteccin
Social, siguiendo las directrices de poltica nacional y de los acuerdos internacionales en este tema, han adoptado mediante el Decreto 1843 de 1991
y la Resolucin 2906 de 22 de agosto de 2007, los LMR de plaguicidas del
Codex alimentarius. El pas es an deficiente en su capacidad tecnolgica para
la evaluacin del riesgo en inocuidad y carece de metodologas para el establecimiento de LMR de plaguicidas en alimentos.
Para la evaluacin de residuos, el pas se dispone del Laboratorio Nacional
de Insumos Agrcolas del ICA-LANIA, el Laboratorio de Residuos del Departamento de Qumica de la Universidad Nacional de Colombia acreditado
por la Superintendencia de Industria y Comercio y el laboratorio del grupo
Diagnstico y Control de la Contaminacin-GDCON de la Universidad de
Antioquia acreditado por el Instituto de Hidrologa, Meteorologa y Estudios
Ambientales de Colombia (IDEAM) en ISO 17025.
Los datos de residuos en productos frutcolas, aunque escasos, permiten observar la deficiencia en los procesos de inspeccin y vigilancia de la inocuidad de
las frutas, pero sobre todo en aspectos como la comercializacin y el uso de los
plaguicidas. En los ltimos aos hay reportes por parte de autoridades sanitarias
/ 209 /

Sandra Milena Vsquez Meja, Claudio Jimnez Cartagena

de pases europeos sobre la deteccin de residuos de plaguicidas en fruta exportada desde Colombia por encima de los lmites mximos permitidos, lo que
conduce a medidas como la prohibicin de la comercializacin de lotes hasta el
cierre de las importaciones. En la tabla 4 se aprecian los compuestos objeto de
inspeccin por la normativa colombiana en ctricos en general.
Tabla 4. Lmites mximos de residuos de pesticidas (mg/Kg) y otros
compuestos en ctricos segn la normatividad Colombiana
Plaguicida

LMR

Plaguicida

LMR

2,4-d

haloxifop

0,05

2-fenilfenol

10

heptacloro

0,01

abamectin

0,01

hexitiazox 0.5

0,5

aldicarb

0,2

imazalil

aldrin y dieldrin

0,05

imidacloprid

bromopropilato

malation

bromuro

30

metalaxil

carbarilo

metomilo

cihexatin

oxamilo

cipermetrin

paraquat

0,02

clofentezina

0,5

permetrin

0,5

clorpirifos

piperonil butxido

deltametrin

0,02

piraclostrobin

dicofol

piretrinas

0,05

diflubenzuron

0,5

pirimicarb

0,05

dimetoato

piriproxifen

0,5

fenbutatin xido

procloraz

10

fention

propargita

fenvalerato

spinosad

0,3

fludioxonil

tebufenozida

fosmet

tiabendazol

10

glufosinato

0,1

trifloxistrobin

0,5

Fuente: Recopilacin propia

Adicional a las BPA hay otras normas comunes de comercializacin para


alimentos que deben tenerse en cuenta en las empresas agroindustriales y
especficamente en las empresas del sector citrcola.
/ 210 /

La normativa y los estndares de calidad como garanta de competitividad

Sistema British Retail Consortium (BRC)


El British Retail Consortium es una organizacin de comercio en el Reino
Unido que representa los intereses de los detallistas y ha publicado el BRC-Estndar Global de Alimentos, que establece los estndares mnimos de higiene en
plantas manufactureras de alimentos. Similar a lo establecido en las BPM, el BRC
Estndar Global de Alimentos est diseado para cualquier proveedor, sin importar productos o pas de origen, que abastece productos alimenticios a los detallistas
del Reino Unido. Su objetivo es garantizar la calidad y seguridad de los alimentos
durante su elaboracin, aplicables a las etapas posteriores a la produccin primaria
y la certificacin. Esta norma permite el acceso a los mercados agroalimentarios en
Reino Unido, Alemania, Francia e Italia, sin embargo, en el pas pocas empresas
agroindustriales la conocen y en el caso de las empresas citrcolas es an mayor el
desconocimiento de normas extranjeras para la comercializacin perdiendo con
ello oportunidades valiosas para el crecimiento empresarial.

Normas de la familia SO
Con el objetivo de normalizar o estandarizar la calidad para todo tipo
de producto o servicio, la organizacin de estndares Internacionales (ISO)
genera normas comerciales y de gestin empresarial que logran crear un consenso entre los actores empresariales, comerciales y sociales. Estas normas se
cumplen de forma voluntaria ya que la ISO, siendo una entidad no gubernamental, no cuenta con la autoridad para exigir su cumplimiento. Sin embargo, tal como ha ocurrido con los requisitos propuestos por Global GAP,
estas normas pueden convertirse en un requerimiento para que una empresa
se mantenga en una posicin competitiva dentro del mercado.
La familia de normas ISO esta divida en varias series, cada una con propsitos
especficos que las empresas pueden aplicar dependiendo de sus necesidades e intereses. ISO ha desarrollado ms de 18 500 normas internacionales35. La serie 9000
se origin debido a la necesidad mundial de desarrollar una norma nica para la
operacin y administracin de los sistemas de aseguramiento de calidad36, 37.
Algunas de estas normas permiten la emisin de un certificado del sistema
de gestin de calidad (SGS) y otras son simplemente directrices y orientaciones para entender las series y para la mejora continua de las empresas (normas
de apoyo orientadas a la administracin).
La organizacin ISO realiza revisiones y actualizaciones de las normas con
el fin de garantizar que sean viables y compatibles con los cambios continuos
/ 211 /

Sandra Milena Vsquez Meja, Claudio Jimnez Cartagena

de las empresas y del comercio; es as como en el ao 2000 se public la


tercera versin de la norma ISO 9001 como un nico modelo que remplaza
las normas ISO 9001:1994, ISO 9002:1994 e ISO 9003:1994. Esta versin
(2000) incorpor no solo un cambio en su nombre sino que hizo nfasis en la
efectividad del SGC y el mejoramiento del desempeo de las organizaciones,
evolucionando del concepto de conformance a performance, es decir, se
evolucion de demostrar el cumplimiento de requisitos al mejoramiento del
desempeo de las organizaciones. La ltima revisin de la norma ISO 9001
fue en el ao 2008 donde se public la cuarta edicin. Esta edicin 2008 no
contiene requisitos adicionales, comparada con la del ao 2000; solamente
proporciona aclaraciones de los requisitos existentes e introduce cambios especficos con la intencin de mejorar la coherencia con la norma de gestin
ambiental ISO 14001:2004 para facilitar la integracin de sistemas de gestin
de calidad y sistemas de gestin ambiental.
En la tabla 5, se pueden apreciar algunas de las principales normas usadas,
consultadas e implementadas en las empresas agroindustriales de Colombia:
Tabla 5. Normas SO, aplicacin y objetivos de cada norma
Norma
ISO 8402:
1986
ISO 9001:
2008
ISO 9004:
2009

ISO 14001:
2004

ISO 17000:
2004

Objetivo o mbito de aplicacin


Define los trminos bsicos y fundamentales relacionados con los conceptos de la
calidad, aplicables a todos los campos. Clarifica y normaliza los trminos relativos a
la calidad que sean aplicables al campo de la gestin de la calidad, para evitar malentendidos o confusiones. No es certificable.
Requisitos para los sistemas de gestin de la calidad aplicables a toda la organizacin
que necesite demostrar su capacidad para proporcionar productos que cumplan los
estndares tanto de los clientes como los reglamentarios Es certificable.
Proporciona directrices que consideran tanto la eficacia como la eficiencia del
sistema de gestin de la calidad. El objetivo de esta norma es mejorar el desempeo
de la organizacin y la satisfaccin de los clientes y de las partes interesadas del
sistema de gestin de la calidad. No es certificable.
Requisitos que debe tener un sistema de gestin ambiental, permiten a la organizacin
formular una poltica ambiental, determinar los aspectos y los impactos ambientales
de productos, actividades y servicios, planear objetivos medio ambientales y las metas
mensurables, la aplicacin y el funcionamiento de programas para lograr los objetivos
y las metas, verificar y tomar acciones correctivas, y revisar la gestin administrativa;
teniendo en cuenta adems los requisitos legales. Es certificable.
Establecen los requisitos especficos que cada uno de los organismos de evaluacin
de la conformidad (laboratorios, certificadores e inspectores) deben cumplir para
demostrar su competencia tcnica y los requisitos para la evaluacin de la Conformidad - Vocabulario y Principios Generales. No es certificable. Ofrece definiciones
internacionalmente aceptadas de conceptos que figuran en el Acuerdo sobre Obstculos Tcnicos al Comercio de la OMC.

/ 212 /

La normativa y los estndares de calidad como garanta de competitividad

ISO 17025
2005

Pertenece a la familia 17000. Especficamente se enfoca a laboratorios de pruebas


y calibracin. Con orientacin al cliente y a la mejora continua. No es certificable.
Esta norma establece los criterios para los laboratorios que desean demostrar su competencia tcnica, que poseen un sistema de calidad efectivo y que son capaces de
producir resultados tcnicamente vlidos.

ISO 18000

Especfica el estndar de Sistema de Seguridad y Salud Ocupacional para todo


tipo de Industria. Son compatibles con los estndares de gestin ISO 9.000 e ISO
14.000.

ISO 19000

Marco normativo de referencia para realizar auditorias, ya sea internas (de primera o
de segunda parte) como externas (de segunda o tercera parte). No es certificable.

ISO 19011

Proporciona orientacin relativa a las auditorias de sistemas de gestin de la calidad


y de gestin ambiental. No es certificable.

ISO 22000:
2005

Requisitos para un sistema de gestin de seguridad alimentaria, incorpora todos


los elementos de las BPM y del Sistema HACCP, junto a un sistema de gestin adecuado, que permita a la organizacin demostrar que los productos que suministra
cumplen con los requisitos de sus clientes, as como los requisitos reglamentarios que
les son de aplicacin en materia de seguridad alimentaria.

ISO 27000

Especifican los requisitos del sistema de gestin de seguridad de la informacin.


Fuente: Recopilacin propia.

La principal ventaja de la aplicacin de las normas ISO es la posibilidad


de las empresas de demostrar su capacidad para producir bienes y servicios
tal y como lo declaran en su misin empresarial. Segn Gmez; et al38, la
ISO permite detectar metdicamente las preferencias y exigencias de todos
los clientes y asegurar, por consiguiente, el cumplimiento de sus expectativas,
la reduccin de costos de produccin al evitar desperdicios y re-procesos por
contar con procesos internos organizados y eficientes, permite el aumento de
la productividad al hacer las cosas bien desde la primera vez y el mejoramiento
de la imagen y el posicionamiento en el mercado.
Las revisiones de las normas ISO 9000 han permitido incluir aspectos importantes como las relaciones de mutuo beneficio con el proveedor, el respeto
por la competencia, la mejora continua y la orientacin al cliente basadas en
principios de calidad total; estos dos ltimos aspectos han mostrado resultados exitosos en las empresas39. El principal obstculo para la adecuada implementacin de las normas ISO es que no todas las empresas tienen un enfoque
basado en procesos y ello limita o demora su implementacin; en ocasiones
las empresas no son prcticas en la documentacin que usan y por falta de
compromiso de la gerencia terminan por no cumplir requisitos importantes
y presentan dificultades en la implementacin y el mantenimiento del SGC.
/ 213 /

Sandra Milena Vsquez Meja, Claudio Jimnez Cartagena

Por otro lado, a medida que las empresas del sector agroindustrial se preparan para garantizar la calidad en los productos, procesos y sistemas empresariales por cualquier metodologa, se vuelve mas evidente la necesidad de
garantizar que el producto llegar en adecuadas condiciones hasta el destino
final, principalmente cuando el cliente est por fuera del pas; por ello se han
desarrollado sistemas de certificacin en comercio seguro de los cuales el ms
comn en Colombia es el sistema BASC.

Sistema Business Alliance for Secure Commerce (BASC)


La World BASC Organizacin es una entidad del sector privado que, con el
apoyo de servicios aduaneros, crea la norma BASC de adopcin voluntaria, destinada a ayudar a las organizaciones en el desarrollo de una propuesta de gestin
en control y seguridad en el comercio internacional, que proteja a los productos,
las empresas y los empleados. Para el caso de los productos agroalimentarios se
busca que esta norma garantice la entrega adecuada de la mercanca y se eviten
los riesgos de contaminacin o alteracin por sustancias extraas.
El sistema BASC ha sido implantado por empresas que conocen la necesidad de demostrar objetivamente su responsabilidad en seguridad y como tal han
aceptado el reto de hacer de este sistema una herramienta que conlleva un sinfn
de ventajas adicionales como la posibilidad de convenios internacionales, la necesidad de mejoramiento continuo, la trazabilidad, el establecimiento de mejores
perfiles de riesgo, el cuidado especial que requiere la carga, la disminucin de los
daos de la mercanca por inspecciones, la confiabilidad de todos los procesos
internos y la tranquilidad de clientes, accionistas, autoridades y proveedores.
Los sistemas BASC y BRC no son comunes en nuestro pas, solo han sido
implementado por grandes empresas que tienen mercados extranjeros encontrando en ellos grandes beneficios de comercializacin.

La trazabilidad como herramienta fundamental para cumplir los


requisitos en al industria de ctricos
La trazabilidad es la posibilidad de encontrar y seguir el rastro, a travs de
todas las etapas de produccin, transformacin y distribucin de un alimento, un producto, una sustancia o un animal destinados a la produccin de
alimentos40; dicho de otra forma, es la posibilidad de seguir los pasos que ha
recorrido un producto y sus componentes desde el origen hasta llegar a las
manos del consumidor.
/ 214 /

La normativa y los estndares de calidad como garanta de competitividad

La trazabilidad en todo el ciclo de vida productivo del producto representa una oportunidad para la revisin de los procesos y un avance incalculable en la gestin y mejoramiento de los mismos, y cobra especial inters
en el sector agroalimentario por la necesidad de generar productos inocuos,
mantener la confianza del consumidor y cumplir la legislacin como se
mencion anteriormente.
Un adecuado sistema de trazabilidad debe permitir la identificacin de
cada unidad de venta con un cdigo o lote; a partir de este producto se podra
conocer el proveedor y el nmero de lote de los productos utilizados en su
elaboracin, incluyendo materias primas, ingredientes, envases y material de
empaque; debe permitir diferenciar las condiciones de produccin especficas
de cada lote (maquinaria y operarios involucrados, fases crticas, entre otras);
adems, debe registrar el nmero del lote de envo a cada cliente y localizar y
recuperar el producto en caso de alerta.
La implementacin de la trazabilidad debe efectuarse bajo criterios de uniformidad y coordinacin en el interior de las empresas y en todo el sector
agroindustrial en donde se hace necesario crear un marco de ayuda, unos
referentes normativos y apoyo tcnico, con el fin de que cada empresa los siga
y logre vincularse de forma exitosa a este proceso. En este sentido, Colombia
no ha logrado un avance significativo para la implementacin de programas
de trazabilidad y cada empresa lo realiza de forma independiente sin ningn tipo de articulacin, pues lo toman ms como un requisito para que las
grandes empresas controlen sus procesos y lleguen a mercados internacionales
que como un mecanismo de apoyo y cultura empresarial, razn por la cual se
crean dificultades y se genera apata en su implementacin, principalmente
para medianos y pequeos productores.
Actualmente en el sector citrcola pocas empresas hacen rastreabilidad
completa de sus productos; algunas incluso lo realizan con metodologas bsicas que no permiten evidenciar algunas partes del proceso y son auditadas
por las entidades de vigilancia y control sin ningn tipo de patrn o modelo.
Algunos decretos y legislacin nacional mencionan la necesidad de tener sistemas de trazabilidad, pero solo las grandes empresas han introducido en sus
auditoras mecanismos claros de verificacin, debido a las negociaciones con
almacenes de cadena con presencia internacional.
En los ltimos aos, la UE ha introducido importantes cambios en la legislacin alimentaria referente a trazabilidad: Desde el 1 de enero de 2005 se hicieron exigibles los requisitos en materia de trazabilidad y a partir del 1 de enero
/ 215 /

Sandra Milena Vsquez Meja, Claudio Jimnez Cartagena

de 2006 se hicieron exigibles las normas de higiene para alimentos y piensos, la


doctrina de seguridad alimentaria de la granja a la mesa y el seguimiento integral
de la cadena alimentaria como fundamento de la trazabilidad41.
En pases como Argentina y Espaa en donde la produccin de ctricos
ocupa lugares importantes en el sector agropecuario, se han establecido diversas reglamentaciones para la trazabilidad de los ctricos. Especficamente
en Espaa la Agencia Navarra de Innovacin y la Asociacin empresarial de
Industrias Agroalimentarias CONSEBRO crearon nueve guas bsicas subsectoriales para la gestin de la trazabilidad, buscando ayudar a superar las
dificultades que encuentran las industrias alimentarias con la entrada en vigor
de la normativa Europea de seguridad Alimentaria. Cada gua (industria crnica, lctea, pesquera, frutas y hortalizas, grasas y aceites, productos de molinera, bebidas y otros) es el resultado de estudiar la realidad de cada sector,
estableciendo criterios comunes de actuacin de los empresarios42.
De igual forma, podemos referenciar en el caso de Argentina la Resolucin 255/2003, la cual autoriza la utilizacin del sistema denominado SITCNEA (Sistema Informtico de Trazabilidad de Ctricos del NEA) aprobado
por el Comit Regional del Nordeste Argentino (CORENEA), en el Programa de Certificacin de Fruta Fresca Ctrica de la Regin NEA para exportacin a la Unin Europea.
Las principales ventajas de la adecuada aplicacin de los sistemas de trazabilidad utilizando tecnologas y software en las empresas del sector agroalimentario
son, entre otras, la posibilidad de gestionar un mayor volumen de informacin,
adems de hacerlo con mayor eficacia, aumentar la productividad, reducir costos
administrativos, agilizar los procesos, evitar prdidas de informacin, errores de
trascripcin y ofrecer mayores posibilidades de intercambio de informacin en la
cadena alimentaria, desde la produccin primaria hasta el consumidor final.
La normativa de derecho alimentario expuesta hasta aqu* permite entender
la importancia de cumplir los requisitos establecidos para poder comercializar
y exportar productos agroindustriales incluyendo los ctricos, y garantizar su
inocuidad. Estos requisitos se resumen principalmente en:
t Admisibilidad sanitaria y fitosanitaria de productos agropecuarios, segn
pas de origen.
____________________________________________
*

En cada pas la legislacin es revisada y actualizada constantemente por lo que debe consultarse de forma
continua la vigencia de las normas y decretos antes mencionados

/ 216 /

La normativa y los estndares de calidad como garanta de competitividad

t Requerimientos establecidos en la Ley contra el Bioterrorismo.


t Lmites mximos de agroqumicos permitidos en los productos.
t Para productos frescos, cumplimiento de las BPA.
t Para productos procesados, cumplimiento de las BPM y del sistema HACCP.
t Correcto etiquetado de los alimentos

Competitividad para el sector citrcola en Colombia. Oportunidades y retos


La competitividad, entendida como la capacidad de las empresas de mantenerse en el mercado a travs del tiempo, es una herramienta fundamental de
las empresas de cualquier sector. Para el sector agroalimentario en Colombia,
especficamente para los ctricos, se presenta cada vez con mayores posibilidades la oportunidad de negociaciones en el exterior por el alto potencial
agropecuario del pas.
El acuerdo de competitividad de la cadena productiva de los ctricos43 del
ao 2000 plante grandes retos para la cadena, entre ellos: establecer el Sistema Nacional de Certificacin de la Calidad, difundir y aplicar de manera
masiva las normas de calidad, contar con certificacin ISO 9000 y 14000 y,
HACCP para 60% de la cadena en el ao 2010, metas an no alcanzadas en
su totalidad hasta la fecha.
Por su parte, el Documento de Trabajo No. 66 de Agrocadenas del ao
200544 concluy que el sector citrcola muestra una desventaja competitiva,
pues se caracteriza por ser una cadena importadora, y menciona que las principales debilidades que enfrenta la cadena son la falta de escalas comerciales
significativas, la alta dispersin en la produccin, el bajo grado de asociatividad entre los productores y la falta de cultura agroempresarial; adems,
identifica que existe poco grado de integracin entre la industria y la agricultura; no hay material vegetal certificado; falta investigacin y transferencia de
tecnologa tanto en la produccin agrcola de las frutas como en su manejo
agroindustrial.
Asimismo, este estudio identifica que el desarrollo del sector debe estar
enmarcado en la especializacin de la oferta regional, desarrollando nichos
productivos con orientacin exportadora que slo se dar sobre la base de
un complejo agroindustrial organizado y una estructura empresarial eficiente.
Para esto es necesario tener un mejor conocimiento de los mercados interna/ 217 /

Sandra Milena Vsquez Meja, Claudio Jimnez Cartagena

cionales, en cuanto a variedades, calidades, presentaciones y normas tcnicas


y de calidad; adems, se debe mejorar en aspectos como calidad, sanidad,
inocuidad, produccin de materiales genticos certificados y capacitacin.
En este contexto, las oportunidades y retos para el pas son muchos. Hoy
ms que nunca, los mercados extranjeros buscan productos diferenciados por
sus procesos de produccin, provenientes de empresas que dan valor a lo natural, al mejoramiento continuo y a las certificaciones de calidad, para llegar
al cliente con productos orgnicos, inocuos y diferenciados.
En este sentido, se hace necesario desarrollar las capacidades organizacionales de las empresas colombianas como un elemento fundamental para lograr
ingresar a mercados extranjeros; para ello es necesario que, adems de cumplir
la legislacin nacional e internacional sobre los productos, y aplicar la trazabilidad, se implementen uno o varios sistemas de calidad dependiendo del
mercado (normas o exigencias comerciales) y de las ventajas que traiga para la
empresa que incluyan aspectos fundamentales de la competitividad como la
innovacin*, la diferenciacin y el valor agregado de los productos y servicios,
las alianzas estratgicas con el gremio, la celebracin de acuerdos y convenios
comerciales, el conocimiento del cliente, entre otros.
Lo anterior requiere un cambio en la forma de pensar de muchos empresarios: se debe asumir la calidad como parte de la cultura empresarial, como una
estrategia de competitividad y como un diferenciador de incalculable valor
que, adems, garantiza las capacidades de la empresa de hacer las cosas bien y
no simplemente como una inversin a corto plazo.

Conclusiones
La calidad debe ser enfocada desde diversos puntos de vista y aunque una variable comercial o una exigencia legal sea considerada ms importante que otra, no
significa que alguna de ellas carezca de importancia para la empresa agroalimentaria; en efecto, de nada sirve un producto de buena calidad si no tiene tambin, un
adecuado precio, la oportuna comunicacin y la idoneidad de su distribucin. La
calidad, entonces, aparece como una condicin necesaria para lograr el xito en el
mercado agroalimentario y especficamente en el sector citrcola del pas.
____________________________________________
*

En este aspecto se puede discutir que la innovacin no est ligada exclusivamente al mbito tecnolgico y
al desarrollo de productos, ya que la innovacin en gestin contribuye en gran medida a la capacidad de las
empresas de cambiar los paradigmas y realizar las cosas de una manera distinta, adelantndose al mercado
y a los consumidores.

/ 218 /

La normativa y los estndares de calidad como garanta de competitividad

Las empresas de ctricos del pas debern habituarse a diversos modelos


de mejoramiento continuo para mantener su competitividad. Lo anterior implica que, al igual que otros sectores alimentarios, deben cumplir con la legislacin nacional e internacional, deben obtener la certificacin de su sistema
de gestin de calidad, realizar acuerdos comerciales y alianzas estratgicas y
convertir la calidad en una filosofa organizacional que se refleje en todas sus
actividades, sus departamentos, procesos y productos.
Dar cumplimiento con los lmites mximos de residuos de plaguicidas constituye una de las certificaciones que garantizan el trnsito de los ctricos por los
diferentes bloques econmicos, a su vez que la legislacin europea contempla
un grupo muy amplio de compuestos, lo que evidencia su gran preocupacin
por la sanidad e inocuidad de los productos frutcolas que sern consumidos
por sus ciudadanos. Por su parte, Colombia debe fortalecer no solo su capacidad
tecnolgica, sino ajustar su normativa no solo para cumplir normativas internacionales, sino, para garantizar el bienestar y la salud de la poblacin colombiana.
Referencias bibliogrficas
1. VELSQUEZ, Guillermo. La innovacin y el valor agregado en los productos
de exportacin. En: Revista xito Empresarial. Vol. 6. Octubre 2002.
2. RIVERA, Luis Miguel. Gestin de la calidad agroalimentaria. Espaa: Editorial
A. Madrid Vicente, 1998. 139 p.
3. ACH, Marcos. La importancia de las buenas prcticas de manufactura [en lnea].
Bolivia: Instituto Boliviano de Normalizacin y Calidad (IBNORCA), 2009. [Citado el 13 de Junio de 2010] Url disponible en: http://www.ibnorca.org
4. INSTITUTO COLOMBIANO DE NORMAS TCNICAS Y CERTIFICACIN
-ICONTEC. Norma Tcnica. Sistemas de Gestin Ambiental (SGA). Requisitos con
orientacin para su uso. Bogot: ICONTEC, 2004. 59 p. (NTC ISO 14001).
5. ORGANIZACIN MUNDIAL DE LA SALUD (OMS) Y LA ORGANIZACIN DE LAS NACIONES UNIDAS PARA LA AGRICULTURA Y LA ALIMENTACIN (FAO). Qu es el Codex Alimentarius. Roma: FAO - Secretara
del Programa Conjunto FAO/OMS sobre Normas Alimentarias, 2006. 51 p.
6. BANCO INTERAMERICANO DE DESARROLLO - FOMIN. Memorias del
curso: capacitacin de consultores de Diagnstico de PARTs. Programa Integral de
Apoyo a las Pymes para el acceso al mercado en los EEUU. Bogot: UNAD, 2009.
7. TETRA PAK. The Orange Book. Suecia: Tetra Pak Processing Systems AB,
1998. p. 206.
/ 219 /

Sandra Milena Vsquez Meja, Claudio Jimnez Cartagena

8. FAO - CODEX ALIMENTARIUS. General standard for fruit juices and nectars (CODEX STAN 247). Roma: FAO, 2005. P. 19
9. ________. Muestreo de residuos de plaguicidas: mtodos recomendados (CODEX STAN 229). Roma: FAO, 1993. 25 p.
10. FAO Y OMS. Base de datos en lnea del codex sobre los residuos de plaguicidas en los alimentos. [En lnea]. Roma: FAO, 2010. [Citado el 16 de junio
de 2011]. URL disponible en: http://www.codexalimentarius.net/pestres/data/
index.html?lang=es.
11. TETRA PAK. The Orange Book, Op. Cit., p. 179-187
12. COLOMBIA. MINISTERIO DE PROTECCIN SOCIAL. Decreto 3075 de
1997. Bogot: El Ministerio, 1997. 47 p.
13. COLOMBIA. MINISTERIO DE SALUD. Resolucin nmero 7992 ( 21 de
julio de 1991) por el cual se reglamenta parcialmente el Ttulo V de Ia Ley 09 de
1979, en lo relacionado con la elaboracin, conservacin y comercializacin de
Jugos. Concentrados, Nctares, Pulpas, Pulpas Azucaradas y Refrescos de Frutas.
Bogot: El Ministerio, 1991. 21 p.
14. MILIND, Ladaniya. Citrus Fruit Biology, Technology and Evaluation. Canad:
Elsevier Inc, 2008. p. 179
15. CODEX STAN 247. Op. Cit., p. 4
16. COLOMBIA. MINISTERIO DE PROTECCIN SOCIAL. Decreto numero
60 (Diario Oficial 44.686, enero 18 de 2002). por el cual se promueve la aplicacin del Sistema de Anlisis de Peligros y Puntos de Control Crtico - Haccp en
las fbricas de alimentos y se reglamenta el proceso de certificacin. Bogot: El
Ministerio, 2002. 20 p.
17. MURAT, Bao; MARIYE, Yksel & TUFBA, avuooflu. Difficulties and barriers for the implementing of HACCP and food safety systems in food businesses in Turkey. En: Food Control. 2007. Vol. 18. p. 124130.
18. RESTREPO, Jorge Oswaldo. Buenas prcticas de manufactura en la elaboracin
y preparacin de alimentos: Anlisis de peligros y puntos crticos de control
(HACCP). En: Consejo Colombiano de Seguridad ( 27, 28 y 29 : 06 : 2007 :
Bogot - Colombia).
19. FAO. Codex Alimentarius-Higiene de los alimentos. [En lnea]. Roma: FAO,
2011. [Citado el 15 de Junio de 2011]. Url disponible en: http://www.fao.org/
DOCREP/005/Y1579S/y1579s03.htm
20. ORRISS, Gregory D. Equivalence of food quality assurance systems. En: Food
Control. 1999. Vol.10. p. 255-260
/ 220 /

La normativa y los estndares de calidad como garanta de competitividad

21. ORGANIZACIN DE LAS NACIONES UNIDAS PARA LA AGRICULTURA Y LA ALIMENTACIN. MINISTERIO DE SANIDAD Y CONSUMO DE ESPAA SERVICIO DE CALIDAD DE LOS ALIMENTOS Y
NORMAS ALIMENTARIAS. Sistemas de calidad e inocuidad de los alimentos.
Manual de capacitacin sobre higiene de los alimentos y sobre el sistema de
Anlisis de Peligros y de Puntos Crticos de Control (APPCC). Roma: Grupo
Editorial Direccin de Informacin de la FAO, 2002.
22. RESTREPO, Jorge Oswaldo. Op. Cit., p.17
23. COLOMBIA. MINISTERIO DE LA PROTECCIN SOCIAL. Decreto 60.
Op. Cit., p. 8
24. ZUGARRAMURDI, Aurora; et al. A quality cost model for food processing
plants. En: Journal of Food Engineering. 2007. Vol. 83. p. 414421
25. TAYLOR, Eunice. A new method of HACCP for the catering and food service
industry. En: Food Control. 2008. Vol.19. p.126134.
26. ORGANIZACIN MUNDIAL DEL COMERCIO. Acuerdos Multilaterales
en el Comercio de las Mercancas. [En lnea]. Suiza. Centro de Comercio Internacional. UNTACD-OMC. [Citado 15 junio de 2011]. URL disponible en:
http://www.jurisint.org/pub/06/sp/doc/16.htm
27. COLOMBIA. MINISTERIO DE LA PROTECCIN SOCIAL. Resolucin
5109. Diario Oficial No. 46.150 del 29 de diciembre de 2005. Por la cual se
establece el reglamento tcnico sobre los requisitos de rotulado o etiquetado
que deben cumplir los alimentos envasados y materias primas de alimentos para
consumo humano. Bogot: El Ministerio, 2005.
28. ________.________. Resolucin 0333. Diario Oficial No. 46.894 de enero 31
de 2008. Por la cual se establece el reglamento tcnico sobre requisitos de rotulado o etiquetado nutricional que deben cumplir los alimentos envasados para
consumo humano. Bogot, El Ministerio, 2008. 72 p
29. KARAA, Erdal; RIBAUDOB, Marc y JOHANSSON, Robert C. On how
environmental stringency influences adoption of best management practices
in agriculture. En: Journal of Environmental Management. 2008. Vol. 88. p.
15301537.
30. FAO. Good Agricultural Practices a working concept Background paper for
the FAO Internal Workshop on Good Agricultural Practices. Rome, Italy: FAO,
GAP. 2004. P. 27-29 Working paper serie 5.
31. COLOMBIA, ICA. Buenas prcticas agrcolas. Sistema de aseguramiento de la
inocuidad de los alimentos. Boletn Tcnico. Edicin: Grupo Transferencia de
Tecnologa. Editorial: Produmedios.
/ 221 /

Sandra Milena Vsquez Meja, Claudio Jimnez Cartagena

32. FAO. Principios de Buenas Prcticas Agrcolas (BPA). [En lnea]. Roma: FAO,
2007. [citado 21 junio de 2011]. URL disponible en: http://www.fao.org/prods/
gap/home/principles_es.htm
33. ________. Informe de 1975 de la Reunin Conjunta FAO/OMS sobre Residuos de Plaguicidas. En: Estudios FAO: Produccin y proteccin vegetal N 1.
34. ________. Informe de la JMPR de 1995, En: Estudios FAO: Produccin y
proteccin vegetal n 127.
35. INTERNATIONAL ORGANIZATION FOR STANDARDIZATION ISO.
ISO Standards. [En lnea]. Geneva, Switzerland: ISO [Citado el 02 de junio de
2011]. URL disponible en: http://www.iso.org/iso/home.html
36. GMEZ DE ILLERA, Margarita; AMEZQUITA, Rosa Tulia y MARTINEZ,
Hctor. Gestin de la calidad alimentaria. Santa Fe de Bogot, D. C.: Universidad Nacional Abierta y a Distancia UNAD, 2005. p. 198.
37. FONTALVO HERRERA, Toms Jos y VERGARA SCHMALBAC, Juan Carlos. La gestin de la calidad en los servicios ISO 9001:2008. 2 ed. Barranquilla:
[s.n], 2010. 195 p.
38. GMEZ DE ILLERA, Op. Cit., p. 10-15
39. MARTINEZ-COSTA, Micaela; et al. ISO 9000/1994, ISO 9001/2000 and
TQM: The performance debate revisited. En: Journal of Operations Management. December 2009. Vol. 27, no. 6. p. 495-511
40. UNION EUROPEA. Reglamento (CE) 178/2002 del parlamento Europeo y
del consejo de 28 de enero de 2002. Por el que se establecen los principios y requisitos generales de la legislacin alimentaria, y se crea la autoridad europea de
seguridad alimentaria y se fijan procedimientos relativos a la seguridad alimentaria (D.O.C.E.NL31 de 01.02.2002).
41. ESPAA. MINISTERIO DE SEGURIDAD Y CONSUMO. Agencia Espaola de Seguridad Alimentaria. Gua para la aplicacin del sistema de trazabilidad
en la empresa agroalimentaria. Madrid: El Ministerio, 2004. 79 p.
42. Ibd., p.14-14.
43. COLOMBIA. CORPORACIN COLOMBIA INTERNACIONAL. Acuerdo de Competitividad de la Cadena Productiva de los Ctricos. CCI coleccin
documentos IICA. Serie competitividad No.19. Edicin. Bogot: Papel House
Group, 2001. 80 p.
44. COLOMBIA. MINISTERIO DE AGRICULTURA Y DESARROLLO RURAL. Observatorio Agrocadenas. Documento de Trabajo No. 66. La cadena de
ctricos en Colombia una mirada global de su estructura y dinmica. Bogot: El
Ministerio, 2005.
/ 222 /

Captulo 9 / Chapter 9

Poscosecha
Catarina Pedro Pssaro Carvalho*
Pilar Navarro**
Alejandra Salvador***

Resumen

ng. Agrnoma. Ph.D. en


ng. de Alimentos. C.. La
Selva, Corporacin Colombiana de nvestigacin
Agropecuaria (CORPOCA),
km 7 va Las Palmas,
Vereda Llanogrande, Rionegro, Antioquia, Colombia.

** ng. Tcnico Agrcola. Centro de Tecnologa Poscosecha, nstituto Valenciano


de nvestigaciones Agrarias
(VA), Apartado Oficial,
46113 Moncada, Valencia,
Espaa.
*** ng. Agrnoma. Ph.D. en
ng. Agrnoma. Centro de
Tecnologa Poscosecha, nstituto Valenciano de nvestigaciones Agrarias (VA),
Apartado Oficial, 46113
Moncada, Valencia, Espaa.
Correspondencia:
Catarina Pedro Pssaro
Carvalho
[email protected]

Desde el momento en que los frutos ctricos son recolectados hasta su comercializacin y consumo se inicia
un proceso de deterioro natural, que conducir a la
prdida del producto en un corto periodo de tiempo si
se no se realizan procesos de manipulacin y conservacin para evitarlo.
En Colombia, las prdidas en el periodo poscosecha
de los ctricos son muy elevadas. Para reducir estas
prdidas es necesario entender los factores biolgicos
y medioambientales relacionados con el deterioro del
fruto y conocer la tecnologa poscosecha ms apropiada para retrasar la senescencia y mantener la calidad
del producto lo mejor posible. La manipulacin poscosecha tiene como objetivo mantener las cualidades
de los productos desde que son cosechados hasta que
llegan al consumidor, garantizando la calidad organolptica y nutricional, mejorando la presencia externa
y siempre aplicando las normas y recomendaciones
vigentes.
Normalmente, los frutos ctricos tras la recoleccin
son transportados a las centrales de manejo (o empacadoras) donde son sometidos al proceso de confeccin para su presentacin al mercado o bien expuestos a tratamientos poscosecha especficos como
/ 223 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

desverdizacin o frigoconservacin. Uno de los problemas de competitividad que presenta la cadena citrcola, es el hecho de que la
fruta nacional no cumple con los estndares que impone la demanda
interna o el acceso a nuevos mercados externos. Esto se debe principalmente al deficiente manejo poscosecha que existe en todas las regiones del pas, comenzando por una cosecha inadecuada, deficiente
seleccin, clasificacin y almacenamiento, e insuficiente tecnologa
para mejorar presentacin, lo que finalmente se traduce en abundantes desechos y prdidas.
En este captulo se discute sobre los cambios fisiolgicos que ocurren
tras la cosecha, los requisitos de calidad exigidos por el mercado as
como el proceso de manipulacin poscosecha a los que se somete los
frutos ctricos. Con ello se pretende suministrar al lector el conocimiento necesario para poder realizar la comercializacin del fruto manteniendo la calidad exigida por el consumidor.
Palabras clave: ctricos, fisiologa poscosecha, manipulacin poscosecha, calidad.
Postharvest
Abstract
From the moment in which citrus fruits are collected, to their commercialization and consumption, there is a natural decay process that leads
to lose the product in a short time if processes to handle and conserve
it are not made.
In Colombia, loses in citrus postharvest are very high. In order to
lessen them it is necessary to understand the biological and environmental factors related to the fruits decay and be familiar with
the most appropriate postharvest technology to retard the senescence and keep the products quality as best as possible. Post harvest handling aims to keep the products quality, from the harvest
to the moment in which they are consumed, guaranteeing the organoleptic and nutritional quality, improving the products look
and always applying the regulations and recommendations that are
in force.
Usually citrus fruits, after their collection, are transported to handling
centers or packaging places in which they are submitted to a confection process for being presented in the market, or submitted to specific postharvest treatments, such as degreening or cold storage. One of
the problems for competitiveness the citrus chain has is that national
/ 224 /

Poscosecha

fruits do not meet the standards demanded by the internal and the
external markets. This is due, mainly, to a deficient post harvest management made all over the country, starting with an inadequate harvest,
a deficient selection, classification and storage and a technology insufficient to improve the look of the product, which finally means abundant
discards and loses.
This chapter discusses the physiological changes that take place in the
postharvest, the quality requirements demanded by the market and the
postharvest handling process to which citrus are submitted. All of this
is to provide the knowledge necessary to commercialize the fruit, keeping the quality demanded by consumers.
Key words: citrus, postharvest physiology, postharvest handling,
quality.

ntroduccin
La alta dispersin de los cultivos de ctricos en el territorio colombiano da
origen a una gran diversidad en los sistemas de produccin, y genera problemas tecnolgicos de ndole fitosanitaria, nutricional y de poscosecha, que se
reflejan directamente en los costes de produccin.
Durante el perodo poscosecha se producen importantes prdidas, tanto en
cantidad como en calidad, dependiendo de la especie, mtodo de cosecha, almacenamiento, transporte, entre otros. En Colombia se estiman prdidas entre el 12%
y 25% del total de la produccin, donde la manipulacin y las condiciones de
almacenamiento no son las ms adecuadas y se dispone de muy baja tecnologa1.
Las prdidas poscosecha son muy difciles de cuantificar, sobre todo por la
dificultad en la identificacin de la etapa de la cadena de manipulacin en la que
se induce. El estrs fsico y metablico que sufre el producto durante el manejo
poscosecha, en muchas ocasiones, provoca una alteracin que se manifiesta de
una forma visible no fcilmente relacionada con su verdadero origen2.
Algunos de los principales problemas que afectan la poscosecha de ctricos
en casi todas las regiones de Colombia son los siguientes: cosecha inadecuada,
deficiente seleccin, clasificacin y almacenamiento; baja calidad externa del
fruto (apariencia); insuficiente tecnologa disponible para mejorar presentacin; as como desechos y prdidas.
/ 225 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

Ante esta realidad, es de relevante importancia mejorar las condiciones


de manipulacin, transporte, conservacin y distribucin, para optimizar la
cantidad y calidad de la oferta citrcola colombiana que satisfaga las crecientes
exigencias de los mercados internacionales, en vez de tratar de incrementar la
oferta aumentando los recursos productivos. El principal objetivo de la tecnologa de poscosecha es desarrollar mtodos para reducir al mximo el deterioro
de los productos durante el perodo entre la recoleccin y el consumo. Esto
requiere un conocimiento profundo de la estructura, composicin, bioqumica y fisiologa del producto hortofrutcola, dado que estas tecnologas estn
enfocadas sobre todo a reducir la tasa de metabolismo del producto sin inducir situaciones anormales. A pesar de que existe una estructura y metabolismo
bsico comn a todos los productos, las tecnologas poscosecha deben ser desarrolladas teniendo en cuenta las diferencias que existen entre los productos
hortofrutcolas, entre diferentes cultivares de un mismo producto e inclusive
entre estados de madurez, zonas de crecimiento y estaciones.

Fisiologa poscosecha
La vida de los productos hortofrutcolas puede ser dividida en tres principales estados fisiolgicos que son:
t Crecimiento: es el incremento irreversible en atributos fsicos del fruto.
t Maduracin: es el conjunto de cambios fsico-qumicos que experimentan
los frutos, cuando alcanzan su tamao definitivo y completan su desarrollo, y que determinan que este alcance un color, sabor y determinada
textura que lo hace apto para consumo. Este proceso es consecuencia de la
actividad bioqumica del fruto, la cual es desencadenada por los procesos
fisiolgicos del mismo.
t Senescencia: etapa caracterizada por procesos de degradacin que provocan el envejecimiento y finalmente la muerte de los tejidos del fruto.
t Generalmente, se distinguen dos tipos de madurez:
t Madurez de consumo o gustativa: cuando el fruto alcanza sus mejores caractersticas organolpticas, tales como color de la piel, firmeza de la pulpa,
sabor y aroma, entre otras.
t Madurez comercial o de recoleccin: el fruto se puede recolectar porque
tiene el calibre adecuado y el ndice de madurez requerido para su comercializacin.
/ 226 /

Poscosecha

El estado de madurez en el momento de cosecha es uno de los factores


ms importantes que determina el perodo de vida til y la calidad final de los
frutos. Cualquier fruto recolectado demasiado temprano o demasiado tarde
es ms susceptible a los desrdenes fisiolgicos y tiene un perodo de vida til
ms corto que los frutos cosechados en un estado adecuado de madurez3.
En los frutos ctricos la madurez de consumo se inicia en el ltimo tercio
del crecimiento y termina con las primeras etapas de la senescencia, involucrando una serie de cambios en las caractersticas externas e internas del fruto.
En estos frutos la madurez de consumo solamente puede ser completada si los
frutos permanecen unidos a la planta2.
En la manipulacin de frutos y hortalizas despus de recolectados es necesario tener en cuenta que se trata de estructuras vivas que siguen desarrollando
procesos metablicos para mantener los sistemas fisiolgicos, lo cual acelera
su deterioro, especialmente para aquellos productos con una larga cadena de
comercializacin4. Los procesos metablicos ms importantes en este sentido
son respiracin, transpiracin y produccin de etileno.
Respiracin
La respiracin es un proceso metablico fundamental de todo ser vivo.
Puede describirse como la degradacin oxidativa de los productos ms complejos normalmente presentes en las clulas, como almidn, azcares y cidos
orgnicos a molculas ms simples, como el dixido de carbono y el agua,
con la consiguiente liberacin de energa. Esta energa es indispensable para
mantener el resto de las reacciones metablicas del fruto2, 5.

La prdida de estas fuentes de reservas que tiene lugar durante la respiracin de productos hortofrutcolas significa la aceleracin de la senescencia
debido al agotamiento de las reservas de fuentes de energa para el mantenimiento del metabolismo de la vida celular, prdida de calidad organolptica,
y reduccin del valor nutritivo6, 7.
El principal hidrato de carbono de reserva en el caso de los ctricos es
la sacarosa. La respiracin exige una degradacin enzimtica previa de estos
hidratos de carbono a glucosa. Normalmente en atmsferas ricas en oxgeno,
donde se encuentran los frutos, se desarrolla una respiracin aerbica. En determinadas condiciones, si el oxgeno se encuentra bajo determinados niveles
crticos, los tejidos inician la respiracin anaerbica fermentativa, donde la
glucosa se transforma en acetaldehdo y etanol, y pueden llegar a producirse
sabores extraos.
/ 227 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

Los frutos ctricos pertenecen al grupo de los frutos no climatricos, o sea


que al contrario de los frutos climatricos carecen de la capacidad de sntesis
autocataltica de etileno en la fase de maduracin o previa a ella, por lo que la
madurez interna solo se alcanza en el rbol sin que se registren cambios dramticos en la intensidad respiratoria y la produccin de etileno. Estos parmetros alcanzan en los frutos recolectados valores de 5-10 mg CO2/Kg*h (a 5C)
y 0,0-0,1 mL C2H4/Kg*h (a 20C), respectivamente, lo que se corresponde
con frutos no muy perecederos8. Dependiendo de la especie y temperatura,
presentan un perodo de vida til entre 4-8 semanas9.
El periodo de vida til de los productos hortofrutcolas est directamente relacionado con la tasa de respiracin, as cuanto ms alta es la tasa
de respiracin ms perecedero es el fruto. Es por ello que gran parte de la
tecnologa poscosecha se basa en provocar una reduccin de la respiracin
y, por tanto, una reduccin en el metabolismo, mediante la manipulacin
de las condiciones externas. La respiracin puede estar afectada por muchos
factores, siendo los ms importantes la temperatura, la composicin atmosfrica y el estrs fsico.
Un aumento de la temperatura se traduce en un aumento exponencial de
la velocidad de respiracin. De acuerdo con la ley de Vant Hoff la velocidad
de una reaccin biolgica se duplica con cada incremento de 10C de temperatura. Generalmente, se elaboran tablas que muestran los efectos de la
temperatura en la velocidad de respiracin, y consecuentemente, en la velocidad de deterioro y en la vida til de un producto (tabla 1). Por ejemplo, un
producto con una vida til de 13 das a 20C podr ser almacenado 100 das
a 0C y no ms de 4 das a 40C.
Tabla1. Correlacin entre temperatura, Q10, tasa de respiracin (TR)
y perodo de vida til de un producto.
T (C)
0
10
20
30
40

Q10

3
2,5
2
1,5

TR
(mL CO2/
,HtI

1
3
7,5
15
22

Tiempo mximo de
almacenamiento (das)
100
33
13
7
4

Relacin existente entre la intensidad de un determinado proceso a una temperatura determinada y


ese mismo proceso a una temperatura de 10C menor.
Fuente: Kader10

/ 228 /

Poscosecha

Generalmente, la respiracin se reduce cuando disminuye la temperatura.


Sin embargo, en algunos frutos de origen tropical y subtropical, como es el
caso de los ctricos, la tasa respiratoria sufre un incremento cuando son sometidos a una temperatura por debajo de una temperatura crtica (10-12C) que
provoca alteraciones fisiolgicas denominadas daos por fro, como consecuencia del estrs al que es sometido el fruto.
Transpiracin
La transpiracin es un proceso de transferencia de vapor de agua desde el
fruto hacia la atmsfera. Es un fenmeno general que se produce antes y despus de la recoleccin. Mientras el fruto permanece unido a la planta, las prdidas de agua se reponen a travs del sistema radicular y vascular de la planta.

En los frutos ctricos, una de las principales causas de deterioro fisiolgico


durante el perodo poscosecha es el estrs de agua producido por la transpiracin al separarse de la planta madre y la falta de reposicin. En el caso de
mandarinas se agrava ms esta situacin al ofrecer el fruto una alta relacin
superficie/volumen y menor espesor de corteza que facilitan la deshidratacin.
La transpiracin no solo causa desecacin, arrugamiento y ablandamiento
sino que tambin acelera la senescencia, siendo mayor con las altas temperaturas y baja humedad ambiente11-13 (figura 1).

Figura 1. Sntoma de deshidratacin en mandarina.


/ 229 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

Segn Jimnez-Cuesta; et al14 la prdida de agua durante la manipulacin


de frutos ctricos provoca mermas de peso del orden del 5% en la comercializacin directa, del 7% en la frigoconservacin y de hasta el 16% en un proceso completo de conservacin frigorfica y posterior comercializacin.
La transpiracin se produce en mayor proporcin en la piel del fruto que
en la pulpa15, y en el hemisferio peduncular que en el estilar16, por lo que la
zona peripeduncular del fruto es ms susceptible a la senescencia y, por tanto,
ms proclive a las alteraciones fisiolgicas.
En cuanto a las condiciones externas que influyen en el proceso de deshidratacin son, fundamentalmente, la temperatura y la humedad relativa de la
atmsfera de su entorno, ya que determinan las diferencias entre la presin de
vapor de agua dentro y fuera del fruto.
Etileno

El etileno es una fitohormona vegetal de naturaleza gaseosa que regula


aspectos de crecimiento, desarrollo y senescencia. Dependiendo de dnde y
cundo acte, su efecto ser beneficioso o perjudicial. Antes de que sus efectos
se manifiesten debe ser biosintetizado o adicionado de forma exgena. Qumicamente es el hidrocarburo insaturado ms sencillo (C2H4)17.
En las frutas no climatricas, no hay un incremento en la produccin de
etileno asociado con la maduracin, y la adicin de etileno exgeno no induce
la plena maduracin. Sin embargo, el tratamiento con etileno de frutas no climatricas en ocasiones es til; por ejemplo, el flavedo de algunas frutas ctricas
maduras puede cambiar de color mediante la aplicacin externa de etileno18.
En los frutos no climatricos, el etileno exgeno estimula la respiracin,
la degradacin de la clorofila y la sntesis de pigmentos, pero estos procesos
vuelven a sus niveles originales al poco tiempo de suprimir la aportacin19.
Por otra parte, el etileno puede tener efectos indeseables. La promocin
de la senescencia por causa del etileno en algunos productos hortcolas
cosechados produce una aceleracin de su deterioro y una vida poscosecha
reducida. Esto es debido a que el etileno acelera la degradacin de la clorofila e induce al amarilleo de los tejidos verdes por lo que reduce la calidad
de las hortalizas de hoja, de flor y las inmaduras de fruto, as como el follaje
utilizado con fines ornamentales. El etileno tambin induce abscisin de
las hojas y flores, ablandamiento de las frutas y desarrollo de algunas alteraciones fisiolgicas.
/ 230 /

Poscosecha

Los efectos del etileno en la evolucin del color pueden ser observados a
concentraciones muy bajas: el etileno exgeno promueve su propia sntesis
endgena y es activo en concentraciones muy pequeas (0,1 a 1 ppm).
Factores precosecha
Adems de los propios procesos fisiolgicos involucrados en la maduracin
y senescencia de un producto hortofrutcola, el comportamiento poscosecha
del mismo estar determinado por la influencia de factores precosecha.

Son numerosos los factores precosecha que pueden influir en el comportamiento del fruto una vez recolectado; entre los principales podemos citar:
t Genticos (patrn, especie y variedad)
t Prcticas culturales
t Factores climticos y ambientales
t Aspectos fitosanitarios
Dentro de cada especie de fruta hay un rango de variacin genotpica en
el potencial de la composicin, calidad y vida poscosecha. Existen muchas
posibilidades para utilizar el mejoramiento vegetal y mtodos de la biotecnologa para desarrollar nuevas variedades que tengan buen sabor y calidad
nutricional, o para introducir resistencia a desrdenes fisiolgicos y/o agentes
patgenos causantes de enfermedades que nos permitan reducir el uso de productos fungicidas.
Debera realizarse un buen anlisis de costo-beneficio (incluidas las cuestiones de aceptacin por el consumidor) para determinar las prioridades en
los programas de mejora gentica. En algunos casos, aumentar el consumo de
ciertas variedades con un alto valor nutritivo y sabor, puede ser ms eficaz y
menos costoso que la utilizacin de tcnicas de mejoramiento gentico para
la obtencin de variedades nuevas con altos contenidos en fitonutrientes20.
Los efectos de las condiciones climticas y prcticas culturales antes de la
cosecha sobre la calidad poscosecha de frutas tropicales y subtropicales, han
sido revisados por varios autores21-24. En general, la menor intensidad de la
luz durante el crecimiento conduce a un menor contenido de cido ascrbico
y azcares en estos frutos. La temperatura influye en la absorcin y el metabolismo de los nutrientes minerales por las plantas. El estrs hdrico severo
aumenta las quemaduras solares. El estrs hdrico moderado reduce el tamao
del fruto y aumenta el contenido de los slidos solubles, acidez y cido ascr/ 231 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

bico. Por otro lado, el suministro de agua en exceso a las plantas resulta en el
agrietamiento de los frutos. La excesiva turgencia aumenta la susceptibilidad
al dao fsico, reduce la firmeza, retrasa la madurez y reduce el contenido de
slidos solubles.
El tipo de suelo, el patrn, el acolchado, riego y fertilizacin influyen en el
suministro de agua y nutrientes a la planta. El alto contenido de calcio en las
frutas se ha relacionado con una mayor vida poscosecha como consecuencia
de una mayor firmeza de los tejidos23. El alto contenido de nitrgeno a menudo se asocia con una menor vida poscosecha de frutas21, 22.
Existen numerosos trastornos fisiolgicos asociados con deficiencias de
minerales. Por ejemplo, la mancha roja de los limones est asociada con la
deficiencia de calcio en estos frutos. La deficiencia de boro resulta en abultamientos en la cscara de los ctricos. El exceso de sodio y/o cloruro (debido
a la salinidad) se traduce en una reduccin del tamao de la fruta y mayor
contenido de slidos solubles.
Las prcticas culturales como la poda y el raleo determinan la produccin
de los cultivos y el tamao del fruto, lo que puede influir en la composicin
nutricional de la fruta.
El uso de plaguicidas y reguladores del crecimiento no influyen directamente en la composicin de la fruta, pero indirectamente pueden retrasar o
adelantar la maduracin de los mismos25.
El mtodo de recoleccin puede determinar el grado de variabilidad en la
madurez y las lesiones fsicas y, en consecuencia, influye en la composicin y
calidad de los frutos. Los daos mecnicos (abrasiones, rozaduras superficiales, cortes, entre otros) pueden acelerar la prdida de agua, y aumentar la susceptibilidad a los patgenos que causan las enfermedades. La incidencia y gravedad de estas lesiones estn influenciadas por el mtodo de cosecha (manual
frente a mecnica) y la gestin de las operaciones de recoleccin y manejo.

Calidad de los frutos


La calidad de los frutos se define como el conjunto de propiedades inherentes a un producto que permite distinguir entre unos y otros frutos, que
adems tiene importancia en la determinacin del grado de aceptacin por
el consumidor e implica una combinacin de caractersticas, propiedades y
atributos que le daran al producto un valor como alimento y mercanca26.
/ 232 /

Poscosecha

Como regla general, los mercados exigen determinados ndices de calidad


para los frutos ctricos con destino al consumo en fresco y a la transformacin
industrial, producidos en diferentes regiones del mundo, regulados en diversos documentos legales. Estos ndices son necesarios para evitar la recoleccin
de frutos no aptos y la llegada de estos al mercado con un nivel de calidad
no aceptado por el consumidor27, as como para evitar los cambios en olor y
sabor del zumo o su contaminacin microbiolgica28 cuando se destinan al
procesamiento industrial.
La apariencia (intensidad y uniformidad de color; tamao; forma; firmeza;
ausencia de pudriciones; y ausencia de defectos, incluyendo el dao por fro o
por congelacin, dao de insectos y cicatrices), el sabor (relacin de azucares y
cidos y ausencia de sabores desagradables), el valor nutritivo (principalmente
vitamina C) son considerados atributos que definen la calidad de los ctricos29.
Lo ms importante de cualquier centro de acopio, comercializadora o exportadora debe ser la CALIDAD, dado que el futuro de la misma depender
de su capacidad y habilidad para ofrecer productos y frutos de la ms alta
CALIDAD posible.
La calidad, en su sentido ms amplio, se puede considerar como un compendio de calidades:
t Calidad organolptica: se refiere al contenido en zumo, aroma, sabor, tamao, textura, color, entre otros.
t Calidad microbiolgica: se refiere a la ausencia, tanto interna como externa, de hongos, bacterias y virus.
t Calidad nutritiva: es la cantidad de vitaminas, cantidad de protenas, etc.
t Calidad comercial: est basada en la produccin, empacado, conservacin,
transporte y distribucin; es decir, todas aquellas operaciones realizadas
con los frutos durante los procesos mencionados.
La calidad afecta a una empresa de cuatro maneras:
1. Costos y participacin en el mercado
Una calidad mejorada puede conducir a una mayor participacin en el mercado y a ahorro en el costo. Se ha demostrado que las comercializadoras con
ms alta calidad son las ms rentables y productivas. Cuando se consideran los
costos, se ha determinado que estos son mnimos cuando el 100% de la fruta
producida se encuentra en perfectas condiciones, libre de patgenos y defectos.
/ 233 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

2. La reputacin de la comercializadora
Una comercializadora que desarrolla una baja calidad tiene que trabajar el
doble para desprenderse de esta imagen, cuando llega la disyuntiva de mejorar.
3. Responsabilidad del producto
Las comercializadoras que ofrecen productos defectuosos o con residuos
perjudiciales para el consumidor o el medioambiente pueden ser responsabilizadas por los daos o lesiones que resulten de su consumo.
4. Implicaciones internacionales
La CALIDAD es un asunto internacional en caso de exportacin de los
frutos. Para una comercializadora, sus productos deben cumplir con las expectativas de CALIDAD y precio. Los productos de baja calidad daan la
reputacin de la misma, tanto en el mercado interno como en el extranjero30.
Muchos pases tienen reguladas las caractersticas mnimas exigidas para
la comercializacin de frutas y hortalizas. En el caso de los frutos ctricos
existen Normas y Reglamentos de calidad especficos que regulan su comercializacin en funcin de una serie de parmetros que determinan la calidad
de los frutos.
Parmetros de calidad en frutos ctricos
La calidad de los frutos ctricos puede ser evaluada a travs de una serie
de parmetros, recogidos directa o indirectamente en las diferentes normas y
reglamentos de calidad.

Los parmetros de calidad ms importantes en los frutos ctricos son los


siguientes:
Externos
t Calibre (tamao y peso o volumen)
t Color de la piel
t Firmeza
Internos
t Contenido en zumo
t Slidos solubles totales (SST)
t Acidez total (AT)
t Contenido en cido L-ascrbico (Vitamina C)
/ 234 /

Poscosecha

t Contenido en voltiles del zumo (etanol y acetaldehdo)


Otros parmetros
t Espesor de la piel
t Nmero de semillas
La fruta se clasifica en calibres en funcin del tamao, peso o volumen, los
cuales varan de acuerdo con las normas de cada pas, y la especie y cultivar.
El peso y volumen de un fruto es un parmetro bsico de calidad que nos
indica el grado de crecimiento del mismo.
La relacin peso/volumen es un indicador de la calidad interna del fruto,
como jugosidad o sequedad.
El color externo de los frutos ctricos es tambin un importante parmetro
de calidad contemplado en la mayora de normas y reglamentos internaciones, aunque su medicin resulta a menudo complicada. Puede realizarse de
manera subjetiva a travs de comparacin con cartas de color o de forma objetiva mediante medidas instrumentales.
Los mtodos instrumentales de medida de color de superficies por reflexin
permiten, mediante una serie de normalizaciones definidas por la Comisin
Internacional de Iluminacin (CIE), la identificacin de un color determinado. Se utilizan colormetros triestmulo para la determinacin de las coordenadas bsicas X Y Z, definidos en funcin de un determinado iluminante
y para un observador estndar. Estas coordenadas no son por s mismas suficientes para definir la apariencia de color de un determinado objeto, ya que de
los tres parmetros solamente Y, que indica la luminosidad, correlaciona con
un atributo visual; sin embargo, se pueden transformar matemticamente y a
partir de ellos definir otros sistemas de coordenadas de color, que correlacionen mejor con la apreciacin visual. La escala CIE de cromaticidad (x, y, Y),
en la que Y es la misma de la escala anterior, x = X / X+Y+Z e y = Y / X+Y+Z,
da lugar a valores ms acordes con la apreciacin visual; sin embargo, tiene
aun el inconveniente de que no es uniforme en cuanto al espaciamiento de
colores, por lo que la magnitud de las diferencias de color as obtenidas no se
corresponden con las diferencias captadas por el ojo humano. Es por ello que
se han propuesto otros sistemas, definidos tambin a partir de las coordenadas bsicas X Y Z, pero basados en que el color se aprecia por sensaciones de
colores opuestos: blanco-negro, rojo-verde y amarillo-azul. Los dos sistemas
definidos de esta forma son: el CIELAB que utiliza las coordenadas L*, a*, b*
/ 235 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

y el Hunter Lab cuyas coordenadas son L, a, b. (figura 2). De ellos, el ltimo


es el ms comnmente utilizado para las determinaciones de color en frutos y
hortalizas. En la actualidad los distintos modelos de colormetros triestmulo
que existen en el mercado permiten la lectura directa de estos parmetros (L,
a, b) de forma objetiva y, por tanto, asignar a cada color una posicin determinada en el sistema espacial de ejes, definida por ellos (figura 3). A partir de
estas ternas de valores se pueden establecer relaciones matemticas que permitan asignar a cada uno de ellos un valor numrico nico (ndice de Color),
que sufra modificaciones aumentando o disminuyendo de forma gradual e
uniforme, a medida que evoluciona el color medido dentro de un intervalo y
para una gama de colores determinada. Los ndices de color ms comnmente
utilizados para los frutos en general son: el cociente a/b, el definido como el
arco cuya tangente es b/a y el denominado Chroma que se define como raz
cuadrada de a2+ b2.
Jimnez-Cuesta et al31, tras numerosos estudios y experiencias sobre la evolucin del color en la piel de mandarinas y naranjas, propusieron como ndice
de color para ctricos la relacin matemtica 1000*a / L*b (siendo L, a y b
parmetros de HunterLab), que da una muy buena correlacin con la apreciacin visual, en el intervalo de colores comprendido entre el verde oscuro y
el naranja intenso como puede apreciarse en la figura 4.
La medicin del color mediante medidas instrumentales resulta, sin embargo, complicada fuera del campo de la investigacin, no slo por su elevado coste, sino tambin por una serie de consideraciones de orden prctico,
como son: su fragilidad, la necesidad de que su utilizacin quede restringida a personal con un mnimo grado de especializacin y, sobre todo, a que
la determinacin de color con el mismo requiere la realizacin de mltiples
medidas en cada fruto y en un nmero elevado de frutos, lo que supone un
consumo elevado de tiempo que, frecuentemente, resulta incompatible con
las actividades de la recoleccin o de la manipulacin en una central citrcola. Por ello, el IVIA (Instituto Valenciano de Investigacin Agraria, Espaa)
desarroll y patent un sistema de medicin de color visual, consistente en
12 lminas unidas de manera que pueden abrirse en forma de abanico, cada
una de las cuales corresponde visualmente a un determinado valor de ndice
de color dentro de la gama de los que va adquiriendo la piel del fruto durante
su evolucin (figura 5).
La escala de color publicada est concebida fundamentalmente para mandarinas, que son los ctricos que en mayor porcentaje se someten a desver/ 236 /

Poscosecha

dizacin; sin embargo, puede ser utilizada tambin para naranjas teniendo
en cuenta que en ellas no se dan normalmente las coloraciones naranja ms
intensas o rojizas. La medicin de color en limones y pomelos blancos y rojos
requerira la confeccin de nuevas cartas de color con lminas especficas.
Esta escala de color puede ser un elemento til de trabajo para productores, tcnicos de centrales citrcolas, empresas de asesoramiento de poscosecha
e inspectores. Se ha comprobado tambin que los calibradores electrnicos por
color, que se utilizan actualmente en los almacenes de ctricos, pueden programarse con ayuda de esta escala y separar al menos cuatro grupos de color32.

Figura 2. Esquema de coordenadas L, a, b. definidas


por el sistema Hunterlab.

Figura 3. Colormetro triestmulo Minolta.


/ 237 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

Figura 4. ndice de color (C=1000*a / L*b) que proporciona muy buena


correlacin con la apreciacin visual del color de los ctricos, en el intervalo
de colores comprendido entre el verde oscuro y el naranja intenso.

Figura 5. Escala de color visual para mandarinas y naranjas patentada por el


VA (Valencia, Espaa).

La firmeza es otro de los parmetros a tener en cuenta en el momento de


cosecha, ya que durante el posterior almacenamiento y comercializacin se
va a producir un progresivo ablandamiento (prdida de firmeza) de los frutos
con la consecuente prdida de calidad. Este parmetro est relacionado con
las propiedades mecnicas, y puede ser medido en trminos de resistencia a
la penetracin o puncin, compresin, deslizamiento, impacto y propiedades
de sonido de la corteza.
/ 238 /

Poscosecha

La medicin de la firmeza puede realizarse objetivamente con un durmetro o texturmetro (figura 6). Cuando se utilizan este tipo de equipos para
medir firmeza, es necesaria la siguiente informacin: tipo de instrumento utilizado, las dimensiones y la geometra de la sonda, distancia de penetracin, y
la tasa de carga (velocidad). La carga y el tiempo deben ser estandarizados para
varios tipos de frutas ctricas.

Figura 6. Durmetro digital y texturmetro.


(Fuente: Agro-technologies y personal)

El sistema de anlisis Instron o el sistema de Micro-Stable son sistemas


controlados por software muy avanzados que son operados por computadores y cuyo empleo generalmente queda restringido al campo de la investigacin y la experimentacin, que generalmente no se emplean. El sistema
puede mostrar la velocidad de la sonda / mbolo, la fuerza medida y la dis/ 239 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

tancia. Estos sistemas tienen diferentes clulas de carga de diferentes pesos


(5, 10 y 25 Kg) y durante una prueba de penetracin un mbolo de 5-6
mm de dimetro viaja por el tejido de la fruta a cierta velocidad (1 mm, por
ejemplo) y a una cierta distancia. En este caso, para el clculo de la firmeza
se utiliza, como valor la fuerza mxima necesaria para perforar la cscara,
el pico de la primera fuerza de la puncin, ya que la parte interior es muy
suave, hecha de sacos de zumo.
Otro indicador de la firmeza puede ser la fuerza de compresin. Por
ejemplo, un plato de 65 mm dimetro se pone en contacto con una naranja
a una velocidad 1 mm / s para comprimir una fruta por 10 mm desde el
punto de contacto. Se puede utilizar una clula de carga de 5000 N. La
firmeza se expresa como la fuerza requerida para comprimir el fruto en una
distancia de 10 mm. Valores de fuerza ms altos indican una mayor firmeza33. Tambin se puede medir la compresin en trminos de porcentaje de
deformacin con respecto al dimetro ecuatorial del fruto, calculando la
distancia mxima alcanzada en el fruto, aplicando una fuerza constante de
10 N a una velocidad de 5 mm/min por ejemplo, en el dimetro ecuatorial
del fruto34, 35.
El contenido en zumo es el porcentaje de zumo expresado en volumen
(mL) respecto del peso total de los frutos. Es extrado por mtodos mecnicos
(prensa manual) o elctricos y filtrado. Los frutos ctricos son valorados por
su contenido de zumo. El contenido de zumo disminuye con el avance de la
maduracin y el perodo de almacenamiento. El estado de maduracin y la
calidad de la lima, el limn y el pomelo se basan tambin en la cantidad de
zumo de los frutos, adems del contenido de slidos solubles.
Los slidos solubles totales (SST) de los zumos de naranja dulce, mandarina, pomelo y toronja se constituyen principalmente de azcares (80-85%).
El cido ctrico y otros cidos y sus sales, compuestos de nitrgeno y otras
sustancias solubles, tales como las vitaminas solubles en agua constituyen la
composicin restante de los SST. Los Brix de los zumos de ctricos indican
todos los slidos solubles existentes en el zumo; no son solamente una medida de azcares. La tcnica ms comn de medicin de este parmetro se basa
en la refractometra, y requiere el empleo de instrumentos relativamente
econmicos (figura 7). El refractmetro digital de bolso es muy prctico, y
permite una rpida y exacta medicin. Se puede usar el procedimiento descrito en la NORMA PNTP 011.023/200636, y los resultados se expresan
en Brix.
/ 240 /

Poscosecha

Figura 7. Refractmetro manual y digital para medicin de slidos solubles.

El cido ctrico es el cido ms predominante en los frutos ctricos (80-95%).


En limas, limones y otros frutos ctricos cidos, el cido ctrico constituye la mayor parte de los SST, dado que el contenido en azcares es muy bajo. La acidez
total se puede determinar mediante valoracin volumtrica usando fenolftalena
como indicador o titulacin hasta pH 8,2 y se expresa en % o mg cido ctrico
anhidro / 100 mL zumo36; en la actualidad existen equipos de laboratorio capaces de determinar de forma automtica la acidez de una muestra (figura 8).

Figura 8. Equipos digitales para determinacin automtica


de acidez en frutos.

El sabor de algunos frutos ctricos viene determinado por su proporcin


de azcares y cidos. Ya que los slidos solubles en la mayora de las naranjas,
mandarinas y pomelos estn constituidos por azcares, la relacin entre los
/ 241 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

slidos solubles en cido se utiliza por conveniencia (SST/AT). Este ndice de


madurez (IM) se utiliza generalmente para determinar la madurez mnima
requerida en naranjas, mandarinas, toronjas, pomelos, y sus hbridos para
consumo en fresco. En el caso de limas y limones, la relacin SST/AT no se
utiliza como criterio de madurez. El ndice de madurez mnimo exigido por
las normativas de cada pas para la comercializacin de ctricos en fresco vara
en funcin de la especie y variedad.
El cido ascrbico (vitamina C) se puede determinar por espectrofotometra usando el 2,6-diclorofenol indofenol como indicador, ya que este reduce
el cido ascrbico37. La mayora de los ctricos tienen un rango de pH de 3,0
- 3,5 y este mtodo da resultados bastante exactos. En la actualidad la determinacin de cido ascrbico se realiza por mtodos de cromatografa lquida
(HPLC) que permite su cuantificacin de manera muy exacta.
Aunque las diferentes normas de calidad de ctricos no hacen referencia
expresa al contenido en compuestos voltiles de los frutos s que especifican
que los frutos debern estar exentos de olores y sabores extraos.
El etanol y el acetaldehdo en ciertas cantidades son componentes importantes de la evaluacin de calidad de los frutos ctricos frescos, ya que pueden
estar relacionados con la aparicin de malos sabores38. Puesto que existe una
clara necesidad de desarrollo de mtodos analticos no destructivos como ndices objetivos de medicin de los cambios en la calidad de los frutos ctricos
durante el almacenamiento, los voltiles emanados del fruto entero e intacto
podran servir como un medio no destructivo de evaluacin. En este sentido
la cromatografa de gases podra ser un medio eficaz de medicin; sin embargo, es una tecnologa dispendiosa y, por ende, de limitado acceso.
La presencia de semillas en los frutos es una caracterstica no deseada por
los consumidores, por lo que se han desarrollado muchos trabajos de mejoramiento gentico en ctricos tratando de disminuir su nmero o, incluso,
eliminar su presencia.
Es conveniente eliminar la fruta con semillas con algn mtodo no
destructivo, antes de llegar al mercado. Actualmente, se estn realizando
esfuerzos para desarrollar mtodos no destructivos en tiempo real que se
puedan integrar a una lnea de empaque. La radiografa en tiempo real con
sistemas de rayos X se puede utilizar para este propsito39. Las semillas son
detectadas como zonas grises brillantes (de baja absorcin en relacin con
el medioambiente).
/ 242 /

Poscosecha

Normas de calidad de frutos ctricos


El cumplimiento de los estndares de calidad es una clara ventaja competitiva en el sector hortofrutcola que se refuerza con la obtencin del correspondiente certificado de calidad. Aunque cada pas por lo regular tiene sus
normas, en general estas siempre tienen como referente las Normas de calidad
del Codex Alimentarius, Normas de calidad de la Unin Europea, y Normas
de calidad vigentes en Estados Unidos. En Colombia se aplican las Normas
Tcnicas Colombianas (NTC), expedidas por el Icontec.

Para ctricos, existen normas NTC para las variedades nacionales de mayor
consumo: naranja Valencia, mandarinas (cv. Oneco), lima, toronja, y tangelo
Mineola. Estas normas establecen los requisitos generales de calidad: frutos
enteros con forma caracterstica de la variedad, con presencia de cliz, sanos
(libres de ataques de insectos y/o enfermedades que demeriten la calidad interna del fruto), libres de humedad externa anormal producida por mal manejo en las etapas de poscosecha, exentos de cualquier olor o sabor extraos
(provenientes de otros productos, empaque o recipiente y/o agroqumicos,
con los cuales haya estado en contacto), aspecto fresco y consistencia firme,
exentos de materiales extraos (tierra, polvo de agroqumicos y cuerpos extraos) visibles en el producto o su empaque. El contenido de cada unidad de
empaque debe ser homogneo y estar compuesto nicamente por frutos del
mismo origen, variedad, categora, color y calibre.
En general, las normas estadounidenses son muy especficas en cuanto al tamao
y calibre de las frutas, y tienen el nivel de tolerancia ms bajo de todos los mercados
internacionales, lo que se explica, en parte, por el inters de ofrecer productos de calidad a los consumidores y por la necesidad de proteger la produccin interna frente
a los bienes que podran ser econmicamente ms competitivos. Adems, para muchos productos se especifican las caractersticas de dao, dao serio, dao muy serio.
Las normas en general, resumen los siguientes aspectos:
t Requisitos mnimos de calidad.
t Clasificacin.
t Calibre.
t Empaque y rotulado.
Se pueden consultar o adquirir las diferentes normas en las siguientes fuentes:
t Normas del Codex Alimentarius: http://www.codexalimentarius.net/web/
index_es.jsp
/ 243 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

t http://www.europa.eu.int/eur-lex/es;
t Normas Tcnicas Colombianas NTC: http://www.icontec.org.co/homember.asp
t Normas de calidad para productos agrcolas expedidas en Estados Unidos:
http://www.ams.usda.gov/standards
t Legislacin vigente en la Unin Europea:
En la tabla 2 se presenta un resumen de las normas de calidad internacionales y nacionales encontradas, que definen los requisitos o parmetros mnimos de calidad para la comercializacin de frutos ctricos en
fresco.

Tabla 2. Parmetros mnimos de calidad para la comercializacin de frutos


ctricos en fresco de acuerdo con diferentes normas.
Norma

Europa (UE N
543/2011 Anexo
A; UNECE
STANDARD
FFV-14)

Especie /
Cultivar

Calibre
(mm)

Zumo

Limones
Verdelli y
Primofiore

45 - 90

20

Otros limones

45 - 90

25

SST
(Brix)

AT
(% c
ctrico)

IM

Color
color tpico variedad (CTV)
CTV
2/3 de la superficie del fruto
(CTV)
1/3 de la superficie del fruto
(CTV)
+3 - +6* 1 o
1/3 de la superficie del fruto
(CTV)

Limas

42 - 67

42

Mandarinas,
excluidas
clementinas

45 - >78

33

7,5

Clementinas

35 - >78

40

Naranjas
sanguinas

53 - 110

30

6,5

Grupo Navel

53 - 110

33

6,5

Otras
naranjas

53 - 110

35

6,5

CTV

Satsumas

45 - >78

33

6,5

+1 - +3* 1

70 - >139

33

Citrus grandis
y hbridos
(Pomelo)
Citrus paradisi
y hbridos
(Toronja)

100 - >170

/ 244 /

9
(Oroblanco)

CTV

2/3 de la superficie del fruto


(CTV)

Poscosecha

Peru (PNTP
011.023/2006)

Mandarinas y
hbridos
Tangelos (C.
reticulata x C.
paradisi)

EE. UU.
(CODEX STAN
245-2004)

EE. UU.
(CODEX STAN
219-1999)

55 - >90

45

6,0

Naranjas

58 - >87

33

7,0

Toronjas

83 - 120

40

5,5

Grupo Navel

-13 1 (min para


desverdizar)

30

CTV

33

CTV

35

CTV

Otras
variedades
Otras
variedades

53 - 110

Citrus grandis

110 - >170

Citrus
paradisi

70 - >139

35

Lima-Limn

42 - 67

42

Lima
Mexicana

25 - >45

40

con mas 1/5


color verde
2/3 de la superficie del fruto
(CTV)

45

Limas
Colombia
(NTC 4086)
Colombia
(NTC 1330)
Colombia
(NTC 4087)
Colombia
(NTC 1272)
Colombia
(NTC 4085)
Rangos encontrados en Tmesis,
Suroeste
Antioqueo

7,0
8,52

35

Naranjas
sanguinas

9,0

0,75
1,5

45 - >78

CTV

42
40

8,0 10,93

2,2
1,23

3,5 11,83

2/3 de la superficie del fruto


(CTV)
2/3 de la superficie del fruto
(CTV)
2/3 de la superficie del fruto
(CTV)
0 63
(ndice visual)

Naranjas

61 - >93

Mandarinas
(C. nobilis)

40 - >86

Lima

38 - >68

Toronja

70 - 139

Tangelo
Mineola

54 - >96

45

9,1 11,13

1,5
0,93

6,1
15,93

0 63 (ndice
visual)

Clementina

59,2 60,9

41,4
42,8

10,4 10,8

0,81
0,79

13,0
13,7

+3 - +61

CTV

* ORDEN de 4 de septiembre de 2006, de la Conselleria de Agricultura, Pesca y Alimentacin de la Comunidad Valenciana de Espaa, por la que se especifican las condiciones mnimas de calidad para la comercializacin de frutos ctricos en fresco. [2006/10409].
1
ndice de color (IC): Coloracin del fruto, que se calcula empleando los parmetros de Hunter (L, a, b)
mediante la frmula: IC=1000*a / L*b en donde L mide la luminosidad, a la variacin del verde al rojo
y b, la variacin del azul al amarillo.
2
Depende de la especie/cultivar: incluye Satsuma (7.0), Clementina (7.5), Dancy (7.0), Nova (8.0), Fortuna
(6.0), Murcott (8.5), Otros (7.0).
3
Depende del piso trmico (piso 1 < 700msnm y piso 2 > 900msnm).

/ 245 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

En Colombia, no existe an norma o reporte tcnico donde se establezcan


las especificaciones tcnicas para la cosecha de especies de ctricos cultivadas
actualmente en el pas, diferentes de las mencionadas en la tabla anterior, entre ellas, mandarina Clementina.
En los pases subtropicales solo se obtiene una cosecha estacional, y est
generalizado el uso del ndice de color mencionado en el apartado 3.1, como
indicador del momento ptimo de cosecha.
La Universidad de Antioquia y Corpoica, con el apoyo financiero del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, ha realizado numerosas experiencias con el objetivo de determinar las especificaciones tcnicas para mandarina
Clementina en Colombia, y al mismo tiempo evaluar si cumplen con las
especificaciones internacionales.
As, en la Hacienda La Cristalina, situada en Tmesis en el Suroeste Antioqueo, se realizaron varias cosechas de mandarina Clementina entre los aos
2008 y 2009, realizando cosechas totales de cinco rboles aleatorios (aprox.
500 frutos). En la figura 9 se muestra un histograma de distribucin del
color de frutos de mandarina Clementina durante la cosecha de diciembre
de 2008 en La Cristalina, de acuerdo con la escala de colores del IVIA36; realizndose una correspondencia para cada uno de los ndices de color de la tabla
con un intervalo de color. En la figura se evidencia que el mayor porcentaje de
frutos presenta un IC entre -15 y +2, un color verdoso o pintn.

30

Frutos (%)

25
20
15
10
5
0

Figura 9. Histograma de frecuencias de distribucin del color de mandarina


Clementina durante la cosecha diciembre 2008 en el suroeste antioqueo, de
acuerdo con la escala de color del VA.

/ 246 /

Poscosecha

Los resultados encontrados estn de acuerdo con los obtenidos por


Goldschmidt40 , segn el cual en las regiones tropicales, donde las temperaturas permanecen altas todo el ao, los niveles de clorofila en el fruto
permanecen elevados en la corteza de los mismos; por tanto, la fruta permanece de color verde, y no alcanza nunca el color naranja intenso tpico de
los pases subtropicales.
En la tabla 3 se muestran los parmetros de calidad registrados para cada
intervalo de color de la piel correspondiente a cada uno de los ndices de color
de la tabla IVIA para mandarinas36. No se observ ninguna tendencia en el
contenido de cido ascrbico, y se mantuvieron los valores entre 23.0 y 28.5
mg/100 mL, a travs de los grados de madurez.
Cabe destacar que, de acuerdo con los resultados, la fruta se conserva bien
en el rbol, pero pasado un tiempo se produce prdida de zumo aunque se
mantenga bien la corteza, lo cual provoca una retraccin en la fruta que genera el bufado de la misma. Segn Reuther41, cuando el fruto no es recolectado
en su momento ptimo, este inicia un proceso de senescencia en el cual va
perdiendo calidad progresivamente. Este deterioro es ms rpido en las regiones tropicales debido a las altas temperaturas, lo que ocasiona mayores tasas
metablicas (respiracin), y por consiguiente, un descenso rpido de la acidez,
lo que produce fruta con zumo inspido.
Tal como ha sido reportado por varios autores, el contenido total de compuestos fenlicos disminuye con el avance de la maduracin42, debido al agotamiento de las reservas antioxidantes como consecuencia del aumento del
estrs oxidativo o a un mecanismo regulador en la fruta para aumentar su
palatabilidad43.
De acuerdo con los libros de registro para mandarina Clementina de la
hacienda La Cristalina (Tmesis), el IM a cosecha promedio en el ao 2008
fue de 17,3 2,06 (datos no mostrados). Relacionando este ndice con los
datos de la tabla 3, podemos ver que este se corresponde con frutos en un
estado de madurez muy avanzado, y por lo tanto, frutos menos resistentes a
todo el proceso de poscosecha, menor vida til y, adems, menor contenido
de compuestos fenlicos, o sea, un fruto menos saludable.
En Colombia, concretamente en Antioquia, la cadena de comercializacin que
maneja la empresa Agrcolas Unidas afortunadamente es corta: los frutos rpidamente son comercializados por la Central Mayorista o las grandes superficies en
Medelln, por lo que las prdidas por calidad no son tan elevadas como sera de esperar debido a la senescencia del fruto. Sin embargo, se debe tener en cuenta que
/ 247 /

/ 248 /

[-11;-7]

[-7;-4]

[-4;-2]

[-2;-2]

[2;4,5]

[4,5;7,5]

[7,5;12]

[12;22]

[22;36]

-9

-5

-3

15

29

25,0 m

18,1 l

10,0 j

5,9 i

3,3 h

-0,4 g

-3,0 f

-5,4 e

-8,9 d

-12,8 c

-22,9 a*
-19,8 b

IC
(1000*a/L*b)3

0,62 a

0,63 a

0,76 ab

0,79 bc

0,81 bc

0,80 bc

0,81 bc

0,84 bc

0,87 bc

0,92 c

2,58 d
2,54 d

Acidez (g c.
ctrico/100mL)

10,6 ef

10,9 f

10,9 f

10,2 d
10,1
cd
10,4
de
10,8 ef

9,8 bc

9,7 b

9,5 b

8,4 a
8,4 a

SST
( Brix)

17,1 g

17,4 g

14,3 f

13,7 ef

13,0 ef

12,6 de

12,7 de

11,8 cd

11,1 bc

10,3 b

3,3 a
3,3 a

IM
(SST/acidez)

44,9 f
42,3
def
41,4
cde
42,8
def
40,5
bcd
37,6 b
38,3
bc

33,1 a
36,7 b
44,8
ef
44,2
def
44,9 f

Zumo
(%)

23,0 a

60,8 d

26,7 cde

60,7 cd

ND

27,5 de

60,9 cd

60,9 d

26,0 bcde

59,2 bcd

23,5 ab

25,8 bcde

59,2 cd

60,3 d

24,7 abcd

58,3 bc

28,1 e

24,2 abc

57,3 b
58,2 bc

ND
27,3 de

AA
(mg/100mL)

37,4 a
39,2 a

Dimetro
(mm)

74,5 a

78,1 a

83,3 a

80,2 a

78,0 a

80,9 a

80,8 a

78,2 a

77,4 a

81,4 a

PT
(mg
GAE/100mL)
103,9 b
81,9 a

ndices de color determinados en los frutos con un colormetro por reflexin y calculado como IC = 1000 * a \ L * b.

AA: cido Ascrbico; PT: Polifenoles Totales; GAE: Equivalentes en cido Glico

ND: no determinado.

* Valores seguidos de la misma letra en cada columna no difieren significativamente de acuerdo al test LSD (p < 0.05).

Intervalos de color correspondientes a cada uno de los ndices de color presentes en la tabla de color IVIA (PNTP 011.023/2006).

ndices de color de la tabla de color IVIA (Instituto Valenciano de Investigacin Agraria, Espaa) para mandarinas (PNTP 011.023/2006), determinados por la formula
IC = 1000 * a \ L * b.

[-15,5;-11]

Intervalo
de ndices
de color2
[-30;-22]
[-22;-15,5]

-13

-26
-18

Tabla Color
IVIA1

Tabla 3. Relacin entre ndice de color y parmetros de calidad para mandarina Clementina con diferentes grados de
madurez, en el suroeste antioqueo.

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

Poscosecha

en el caso de que en un futuro sea necesario manejar una ruta de comercio ms


larga o incluso en el caso de exportacin, que implica largos perodos de transporte martimo por fro y luego perodos de transporte terrestre y comercializacin,
los frutos se deberan recolectar en un estado de madurez menos avanzado.
Por otro lado, dada la tendencia actual de los consumidores por frutos
saludables, se debera considerar una recoleccin ms temprana bajo el lema
de propiedades funcionales (mayor contenido de antioxidantes), para beneficiar de un valor agregado al producto.
Si comparamos nuestros resultados (tabla 3) con los parmetros internacionales de calidad (tabla 2), la mandarina Clementina cultivada en el
suroeste antioqueo puede cumplir satisfactoriamente con estos, y con IM inferiores a los que se viene manejando actualmente. Sin embargo, hay que considerar el calibre de los frutos porque, independientemente del IM del fruto,
estamos en calibre 2 de acuerdo con la norma Europea, parmetro que puede
mejorarse con la aplicacin de reguladores de crecimiento, y otras tcnicas.

Manipulacin poscosecha
La manipulacin poscosecha de frutas y hortalizas tiene como objetivo
conservar las cualidades de los productos desde que son cosechados hasta que
llegan al consumidor, garantizando la calidad organolptica y microbiolgica,
mejorando la apariencia externa, y aplicando siempre las normas y recomendaciones vigentes en cada pas.
El manejo poscosecha de frutos ctricos para consumo en fresco puede esquematizarse segn el siguiente diagrama general de operaciones (figura 10)
Recoleccin
La recoleccin debe efectuarse cuando el ndice de madurez (SST/AT), el contenido en zumo y el calibre alcancen los valores mnimos exigidos por las normativas de cada pas. Debe hacerse en ausencia de roco o niebla y con alicates
o tijeras para evitar el tirn, ya que pueden producirse desprendimientos de piel
que inviabilizan la comercializacin de los frutos. Los envases utilizados son capazos plsticos de 18 Kg y cajas plsticas de 20 Kg. Es deseable usar protecciones
de goma espuma (figura 11) y hacer un volcado cuidadoso para minimizar los
golpes. El volcado en agua es un procedimiento mucho ms suave y que tambin
sirve para el transporte. Una vez colocados los frutos en los envases definitivos se
cargan en camiones ventilados, e inmediatamente se deben trasladar al almacn.
/ 249 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

RECOLECCIN

FUNGICIDA EN DRENCHER

TRANSPORTE

CLASIFICACIN POR COLOR

RECEPCIN

VOLCADO

DESVERDIZACIN
1 SELECCIN
a

ALMACENAMIENTO FRIGORIFICO

LAVADO

PRESECADO

DESTRIO/
INDUSTRIA

ENCERADO Y/O FUNGICIDA


SECADO
2 SELECCIN
a

CALIBRADO
CLASIFICACIN POR CALIDAD
ENVASADO

ALMACENAMIENTO FRIGORIFICO

PALETIZACIN
CARGA DE VEHCULOS

EXPEDICIN

Figura 10. Diagrama de flujo general de manipulacin de ctricos.


Los trazos discontinuos indican vas opcionales de procesamiento.

Figura 11. Proteccin de los envases para recoleccin.


Fuente: Ferrato y otros, 201072

/ 250 /

Poscosecha

Confeccin

Como se ha mencionado en el apartado de Normativa de Calidad, los


frutos deben presentarse al consumidor como frutos enteros con forma caracterstica de la variedad, con presencia de cliz, sanos (libres de ataques de
insectos y/o enfermedades que demeriten la calidad interna del fruto), libres
de humedad externa anormal producida por mal manejo en las etapas de
poscosecha, exentos de cualquier olor o sabor extraos (provenientes de otros
productos, empaque o recipiente y/o agroqumicos, con los cuales hayan estado en contacto), aspecto fresco y consistencia firme, exentos de materiales extraos (tierra, polvo de agroqumicos y cuerpos extraos) visibles en el
producto o su empaque. El contenido de cada unidad de empaque debe ser
homogneo y estar compuesto nicamente por frutos del mismo origen, variedad, categora, color y calibre.
Esto implica que tras la recoleccin los frutos deban ser sometidos a una
serie de operaciones antes de su puesta en el mercado. En el caso de los
ctricos, este acondicionado de la fruta se lleva a cabo en las centrales hortofrutcolas o empacadoras donde se dispone de lneas de confeccin ms
o menos complejas en las que se efectan las operaciones bsicas esquematizadas en el diagrama de flujo de manipulacin detallado al principio de
este apartado.
Las lneas de confeccin deben estar dimensionadas para el cmodo acceso
de los operarios a las tareas de tra y seleccin, sin sobrecargarse y evitando
saltos o cambios de altura, perjudiciales por los daos externos e internos que
puedan producirse.
En algunos casos se puede hacer un tratamiento fungicida previo, antes
de entrar a la lnea, mediante un tratamiento en drencher (ducha con agua
con fungicidas), el cual permite una optimizacin del uso, menor cantidad
de vertidos y mayor uniformidad; o mediante la aplicacin directa en la cmara de un fumgeno, que permite un tratamiento eficaz, cmodo y rpido
sin generacin de residuos (figura 12)44. La fruta es tratada en drencher
principalmente cuando se va a hacer desverdizacin o almacenamiento refrigerado.
La descarga de los frutos en la lnea (volcado) se puede hacer en seco o en
agua; en ambos casos es muy importante disponer de desaceleradores de cada
para minimizar los golpes asociados a esta operacin, adems de contribuir a
regular el flujo del producto (figura 13)
/ 251 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

Figura 12. Uso de drencher y fumgenos como tratamientos


previos en la lnea de ctricos.
Fuente: Conesa44

Figura 13. Volcado en seco y en agua.

/ 252 /

Poscosecha

Es conveniente que los rodillos en la lnea de recepcin tengan una estructura de soporte en ngulo que permita eliminar hojas y ramitas. En el tramo
de seleccin la iluminacin es fundamental y debe tener una intensidad mnima de 700 lux. Las cabinas de luz ultravioleta pueden utilizarse para deteccin
precoz de podridos en perodos lluviosos.
El lavado se hace, en la mayora de los caso, con mquina lavadora, bien sea
mediante cortina de espuma o por boquillas. Se deben usar detergentes alcalinos o neutros, como dodecil benceno sulfonato sdico en concentraciones del
orden del 10%, y normalmente se aade un fungicida OPP (ortofenilfenol)
con un tiempo de contacto de 30-40 segundos. Los cepillos de la lavadora
suelen ser de nylon y no deben girar a ms de 80 r. p. m.; el tiempo de permanencia es de 20-30 segundos. En algunas variedades de piel fina, conviene
reducir el nmero de cepillos.
En el enjuague, las boquillas que expulsan el agua deben trabajar con una
presin de aproximadamente 200 Kpa, y el escurrido se debe de realizar en
aros de ltex (donuts) en los que la velocidad de rotacin es crtica y no debe
exceder de 75 r. p. m.
En la misma mquina de espuma puede efectuarse despus, la aplicacin
de fungicidas en pulverizacin a baja presin. El agua de enjuague puede llevar incorporado algn desinfectante que no deje residuos en la fruta: ozono o
perxido disuelto en agua44, 45.
Encerado
En la manipulacin de frutos ctricos es una prctica habitual el encerado
de los mismos, con la finalidad de devolver al fruto la capa de cera natural
perdida en el lavado y cepillado previo, y as reducir las prdidas de peso por
transpiracin. Adems, las ceras proporcionan una barrera al libre intercambio de gases, aportan brillo mejorando la apariencia y proporcionan un soporte para los fungicidas y reguladores de crecimiento.

El uso de recubrimientos o ceras est regulado por entidades oficiales en los


diferentes pases. En EE. UU., la agencia que regula el uso de recubrimientos es la FDA (Food and Drug Administration). Este organismo aprueba los
ingredientes como aditivos alimentarios directos o como GRAS (Generally
Regarded as Safe), basado en el cumplimiento de evaluaciones muy extensas y seguras. En este pas, la cera de carnauba y la resina de madera estn
permitidas como ingredientes no sintticos en los revestimientos de ctricos
orgnicos. En Japn, el Ministerio de Salud Publica y Bienestar Social publica
/ 253 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

las normas japonesas de los aditivos alimentarios en los que se mencionan ingredientes aprobados para la preparacin de recubrimientos y aditivos alimentarios. En la UE, cada pas sigue sus propios reglamentos juntamente con las
normas del Codex (FAO). En Colombia no existe normativa para el empleo
de recubrimientos en frutas.
Los aditivos alimentarios, que pueden utilizarse para recubrimientos de
frutos ctricos en la UE son: cera de abeja blanca y amarilla (E901), cera
de candelilla (E902), cera de carnauba (E903), goma-laca (E904), esteres de
cido montnico (E912), cera de polietileno oxidado (E914), sucroesteres de
cidos grasos (E473), sucroglicridos (E474) y esteres glicridos de colofonia
(E445). Como disolventes se autorizan agua, etanol y amoniaco. Como soportes y disolventes soportes, se permite el uso de lecitinas (E332), polisorbatos (E432-436), sales sdicas, potsicas y clcicas de cidos grasos (E470a),
mono y digliceridos de cidos grasos (E471), sorbitoles (E491, E495), cidos
grasos (E570) y dimetilpolisiloxanos (E900).
Normalmente, en ctricos se emplean emulsiones acuosas de ceras y resinas,
y la composicin del recubrimiento influye sobre la fisiologa del fruto, modifica
la permeabilidad al vapor de agua y a los gases de respiracin, O2 y CO2, y puede afectar en algn caso al aroma y sabor46. Las ceras formuladas para incrementar el brillo, como las basadas en resinas de goma laca, usadas generalmente en
la industria de ctricos, tienen permeabilidad relativamente baja a los gases O2
y CO2, y tienden a bloquear los poros47, lo que genera un contenido en etanol
ms elevado que las ceras de carnauba, candelilla y polietileno48.
La formulacin de las ceras debe permitir un adecuado intercambio gaseoso del fruto con su entorno. Adems, el espesor y uniformidad de la capa de
cera tambin es muy importante, ya que un espesor excesivo puede dar lugar
a condiciones anaerobias en el interior del fruto, con la consiguiente aparicin
de malos sabores.
Dependiendo del destino de los frutos, la concentracin de slidos totales
de las ceras vara: en comercializacin directa se usa una concentracin no
superior al 18% y para almacenamiento en fro la concentracin debe de ser
ms baja, mximo del 10-12%, para evitar malos sabores, dado que el perodo
de almacenamiento es ms largo.
En la lnea de confeccin, se recomienda que el encerado se realice con
boquillas que aseguren la correcta aplicacin sobre la superficie del fruto
y que la operacin se haga sobre el menor nmero de cepillos posible con
/ 254 /

Poscosecha

una velocidad inferior a 8 r.p.m. Tras el encerado, la fruta debe secarse.


Generalmente, este secado se hace en tneles a temperatura del aire entre
40-50C, y el tiempo de permanencia en el tnel debe ser inferior a 3 min.
En la actualidad se estn introduciendo ceras que se secan a baja temperatura (30C), y reducen el peligro de alteraciones en los frutos por las altas
temperaturas del tnel de secado44.
En Colombia se estn llevando a cabo estudios sobre el comportamiento
de diferentes ceras en funcin de las diferentes condiciones ambientales del
pas. En este sentido, en los ensayos llevados acabo por la empresa Colombiana Tao Qumica S. A. S., se ha observado que para humedades relativas
altas, el agua del ambiente tiende a condensarse sobre la fruta, por lo que hay
que aumentar la dilucin inicial de cera, disminuyendo el brillo en la fruta y
el control de las prdidas de peso. Por tanto, debera usarse la cera pura o con
poca dilucin y usar secadores para mejorar el tiempo de secado. En climas
fros como Bogot, con humedades relativas entre 76 y 86% y en temporadas
de alto invierno se han encontrado problemas debido a la dificultad de secado
del recubrimiento de la fruta puesto que el gradiente de concentracin de
agua se hace muy pequeo, lo cual disminuye drsticamente la velocidad de
secado. Adicionalmente, la condensacin de agua sobre la fruta puede conducir a problemas de blanqueamiento. En otras regiones del pas como el Valle
del Cauca y suroeste antioqueo, donde se presentan humedades relativas
inferiores, no se han presentado este tipo de inconvenientes y se encuentran
tiempos de secado ms cortos, por lo que se puede disminuir la concentracin
de la cera49.
En el Instituto de Ciencia y Tecnologa de Alimentos de la Universidad
Nacional de Colombia sede Bogot73 evaluaron dos tipos de cera (comercial
Johnsons y frmula del ICTA) en la conservacin de la naranja Valencia a
temperatura ambiente (20C 65%HR) y refrigeracin (10C y 90% HR), y
encontraron que ambas ceras prolongaron el perodo de vida til en 23 y 44
das en ambiente y frigoconservacin, respectivamente. Los frutos tratados
con la cera ICTA no alcanzaron un cambio total de color de verde a amarillo
al final del perodo de almacenamiento.
Por otra parte, Carvalho et al50, de Corpoica, evaluando el efecto de
una cera comercial (mezcla de resina sinttica y natural con goma laca) en
frutos de Clementina durante 5 semanas de almacenamiento a 4C, no
observaron diferencias significativas entre la prdida de peso de los frutos
encerados (R) y los no encerados. Adems, despus de 3 semanas a 4C la
/ 255 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

prdida de peso alcanz valores superiores al 7%, en ambos tratamientos,


lmite aceptable comercialmente, por lo que la mandarina Clementina en
estas condiciones solo puede ser almacenada por un perodo mximo de
2 semanas. La cera ensayada no control eficientemente este parmetro
(figura 14). Esto puede ser debido a una excesiva dilucin del producto o
a las caractersticas del recubrimiento utilizado. No se observ efecto significativo de la cera sobre los parmetros organolpticos ni sensoriales. La
calidad general de los frutos disminuy con el tiempo de almacenamiento
(figura 15).
En experiencias realizadas por la empresa Colombiana Tao Qumica S. A.
S., comparando dos formulaciones propias (mezcla de resina natural modificada con cera carnauba, 18-20% p/p), con una cera comercial importada
(colofonia sin esterificar, (18-25% p/p), se ha observado un efecto significativo del encerado sobre la reduccin de prdida de peso en naranja Valencia
recolectada en Medelln y almacenada a temperatura ambiente durante 7 das
(figura 16), y el efecto de sus formulaciones fue significativamente mayor el
efecto de sus formulaciones con respecto al competidor nacional. No obstante, es de destacar que despus de 4-5 das a temperatura ambiente ya se
alcanzan prdidas de peso superiores al 5%.

Figura 14. Prdida de peso en frutos mandarina Clementina en dos estados de


madurez (M1 = M 10; M2 = M 13) encerados y sin encerar (M1 y 2 = sin
cera; M1 y 2R = cera comercial) almacenados a 4C durante 5 semanas.

/ 256 /

Poscosecha

nicio

Final

Figura 15. Anlisis sensorial por aproximacin multidimensional de frutos


mandarina Clementina almacenados a 4C durante 4 semanas y 7 das a 20C.

Figura 16. Prdida de peso de frutos de naranja Valencia encerados y sin


encerar en condiciones ambientales en Medelln ( 22C).
/ 257 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

Tambin se obtuvo una reduccin de prdida de peso con el encerado (mezcla de resina natural modificada con cera carnauba, 18-20% p/p) en limn
Tahit y mandarina Oneco a temperatura ambiente, aunque no se observaron
diferencias significativas en mandarina Oneco respecto al testigo (figura 17).
Para limn Tahit cabe destacar que entre el 3 y el 4 das ya se alcanzan prdidas de peso superiores al 5% para Cerabrix y competidor nacional 249.

Figura 17. Prdida de peso en frutos de limn Tahit y mandarina Oneco


encerados y sin encerar en condiciones ambientales en Medelln ( 22C).

El manejo de las ceras en Colombia y su perspectiva en los consumidores


es muy diferente respecto a otros pases, como por ejemplo, Espaa. Para los
productores y comercializadores de frutas locales, la importancia de un recu/ 258 /

Poscosecha

brimiento se basa principalmente en la mejora de la apariencia externa del fruto (incremento del brillo), dejando en un segundo plano las reducciones por
prdida de peso y conservacin de las mismas. En otros pases el aspecto del
brillo no es tan importante, y por eso se aceptan brillos medios en detrimento
de una buena conservacin49.
En Colombia son necesarios ms estudios sobre ceras y recubrimientos en
funcin de la especie, el cultivar, el ndice de madurez, la localidad y el almacenamiento, para conseguir una mejor manipulacin y calidad de producto.
El sector de ctricos ha empezado a abordar el cambio que supone la
implementacin de mtodos de produccin y manipulacin de frutos que
aseguren la calidad de los mismos desde el punto de vista de residuos qumicos, as como de respeto al medioambiente. Es por ello que se estn introduciendo ceras formuladas a base de compuestos naturales en detrimento
de los compuestos sintticos derivados del petrleo. En este sentido se estn
comercializando ceras con componentes totalmente comestibles (GRAS,
Generally Recognize as Safe) aptas para ctricos y otros frutos como caqui,
ciruela, entre otros51.
Clasificado y empacado.

Los frutos ctricos son clasificados por su tamao (calibrado). El calibrado


puede ser manual o mecnico. En el calibrado manual se suele utilizar una
serie de lminas de cartn o madera agujereadas de acuerdo con los calibres
estndar de mercado. El calibrado mecnico puede realizarse por rodillos basculantes en los que la fruta apenas sufre impactos. Para asegurar la medida del
mximo dimetro la mquina hace rodar el fruto mientras este avanza. El calibrado electrnico representa el mayor avance de la aplicacin de la tecnologa:
peso, dimetro, volumen o color se miden por copas de pesado en cmaras de
visin artificial. Se pueden integrar programas codificados con los parmetros
de color y peso, en la misma mquina.
Los calibradores no deben daar los frutos y deben estar dimensionados
para la fruta de menor tamao, y contar con un sistema de salida fluido para
obtener un rendimiento adecuado.
Una vez calibrada la fruta debe ser clasificada por aspecto externo. La clasificacin
admite tres categoras Extra (sin defectos), I (ligeros defectos de forma, coloracin
inherentes a la formacin del fruto o cicatrices de origen mecnico), II (defectos de
forma, coloracin, corteza rugosa y alteraciones en la epidermis cicatrizadas).
/ 259 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

Una vez finalizado el proceso de seleccin y clasificacin, se procede al


empacado y etiquetado en funcin de las exigencias y normativas del punto
de venta del producto. De forma general, los empaques pueden ser de diversos materiales como la madera, el cartn, el plstico y combinaciones de
ellos (figura 18). Son preferibles los empaques que pueden ser recuperados,
reciclados o reutilizados.
Dependiendo de su grado de calidad y de las exigencias del cliente, el
empaque puede ser hecho de forma manual individual, lo que supone un
alto valor aadido, o puede hacerse de forma semiautomtica o totalmente
automtica. Otro tipo de empaque, requerido normalmente por las grandes
superficies, es el enmallado, que suele hacerse de forma totalmente automtica
en pequeas bolsas prepesadas, que posteriormente se empacan en cajas de
madera o cartn y facilitan su venta al consumidor de forma individualizada.

Figura 18. Envases usados para ctricos.


Por ltimo, las cajas se apilan formando pallets y posteriormente estos se enmallan o aseguran con flejes y cantoneras, para eliminar el riesgo de desplome.
Una vez formados los pallets, estos pueden ser cargados directamente en
vehculos refrigerados para su transporte, lo que exige un preenfriamiento
/ 260 /

Poscosecha

previo, o pueden ser almacenados dentro de las cmaras refrigeradas hasta


su expedicin al mercado. En el almacenamiento se debe tener en cuenta la
seguridad de la carga: es necesario que el aire circule entre la fruta; entre las
paredes y los pallets o bins se deben dejar 25 cm; entre los pallets o bins y el
techo 1.5 m como mnimo; longitudinalmente los pallets o bins deben dejar
entre s 15 cm.
La siguiente lista de chequeo puede ser usada en la inspeccin de potenciales daos en una lnea de confeccin:
t Cadas en superficies no protegidas.
t Protuberancias en superficies de impacto.
t Cambios de direccin en el flujo del producto.
t Velocidades exageradas en los componentes de la lnea y en los rodillos y
cepillos.
t ngulos muy agudos en los platos de transferencia52.
Son numerosos los daos que pueden producirse por una mala o inadecuada manipulacin; entre los ms comunes se pueden citar:
t Daos por tipo de envases utilizados (figura 19 a).
t Daos por los cepillos (figura 19 b).
t Dao por productos qumicos (dosis) (figura 19 c excesiva concentracin de ortofenilfenato sdico- SOPP).
t Daos por inmersin en agua caliente (figura 19 d).
t Daos por el tipo de cera utilizada (aplicacin) (figura 19 e).
t Daos en el proceso de secado de la fruta.
Para realizar una adecuada manipulacin poscosecha es indispensable una
correcta limpieza y la desinfeccin de todos los elementos de la Central Hortofrutcola: lnea de tratamiento, suelo del almacn, cajones y/o bins, y cmaras frigorficas.
En Colombia el proceso de manipulacin poscosecha de los frutos ctricos es an artesanal (figura 20), sobre todo, para los pequeos productores
debido a que el mercado domstico es an muy representativo; sin embargo,
algunas grandes empresas efectan el proceso poscosecha esquematizado en
la figura 21.
/ 261 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

Figura 19. Daos que pueden producirse por una mala o inadecuada
manipulacin: a) dao por excesiva presin en el empacado; b) dao por
cepillado; c) dao por excesiva concentracin de SOPP; d) dao qumico por
agua caliente; e) fractura de la capa de cera.

Figura 20. Proceso de seleccin realizado por pequeas


empresas de ctricos en Colombia.
/ 262 /

Poscosecha

Figura 21. Proceso poscosecha general realizado


en Colombia en el suroeste antioqueo.

En general, la recoleccin se hace a mano. Los frutos se remueven con una ligera rotacin, sin embargo, en las mandarinas y tangelos la piel es ms susceptible a
daos por lo que se deben usar tejeras, aunque en algunas zonas del pas esto se ve
muy dificultado por la topografa de los terrenos y el porte de los rboles. Este ltimo factor debera de ser analizado, y replantear el uso de podas para bajar el porte
de rboles o porta-injertos nacionales enanizantes, y analizar costos y beneficios.
Tradicionalmente los frutos se comercializan en bultos o a granel, lo cual genera
prdidas poscosecha del 35%. En la actualidad el transporte a los supermercados
se hace en cajas plsticas para reducir las prdidas. Cuando la fruta se confecciona
antes de llegar al consumidor, las cajas llegan a la empacadora, se eliminan las
frutas daadas y el resto se lava con agua y detergente, luego se cepilla, se seca y
normalmente el encerado se lleva a cabo con ceras con fungicidas como imazalil
y tiabendazol. Posteriormente, la fruta se empaca en cajas de 20 Kg, en bandejas,
mallas, o combinacin de estos, para su envo final al punto de venta53.
Tal y como se ha expuesto en el diagrama de flujo al principio de este apartado,
los frutos ctricos pueden ser sometidos directamente al proceso de confeccin para
su presentacin al mercado o, bien, expuestos a tratamientos poscosecha especficos
como desverdizacin o almacenamiento frigorfico (frigoconservacin) previamente
a su confeccin definitiva o frigoconservacin antes de comercializacin.
/ 263 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

Desverdizacin
La desverdizacin es el tratamiento poscosecha que tiene como nico fin,
modificar el color externo del fruto incidiendo lo menos posible en los restantes parmetros de calidad. El color externo de los ctricos es un atributo de
calidad, y el consumidor relaciona normalmente el color externo del mismo
con su calidad interna. Lo que hace la desverdizacin es aprovechar la circunstancia de que algunas variedades de ctricos, especialmente las tempranas,
alcanzan un nivel suficientemente elevado en azcares y componentes aromticos, y suficientemente bajo de acidez para ser agradables al paladar, antes
de alcanzar la plena coloracin externa (figura 22). Con la aplicacin de esta
tcnica se puede adelantar la comercializacin y poner el producto en el mercado en
momentos de baja oferta y alta demanda, con las consiguientes ventajas econmicas
que esto trae. La desverdizacin de los frutos ctricos es una prctica habitual en
pases como Espaa, Portugal, Israel y Estados Unidos.

Figura 22. Mandarina Clementina de coloracin externa verde (ndice de Color


= -13, C = 1000*a / L*b), pero con ndice de madurez
interno listo para consumo (M = 10).

El tratamiento de desverdizacin consiste bsicamente en la aplicacin de


etileno exgeno en condiciones controladas de temperatura, humedad relativa, concentracin de anhdrido carbnico y concentracin de oxgeno. Entre
los distintos sistemas de desverdizacin, el flujo continuo intermitente, con
2-5 ppm de etileno, humedad relativa del 90% y temperatura entre 20-22C,
CO2 inferior al 0,2% es el ms utilizado54.
En la figura 23, se pueden observar las cabinas de desverdizacin construidas
por Cenicaf (Centro Nacional de Investigaciones de Caf) para investigacin y la
cmara de desverdizacin comercial existente en la empresa Frudelca S. A.
/ 264 /

Poscosecha

Figura 23. Cabinas de desverdizacin experimentales desarrolladas por


Cenicaf55 para investigacin y Cmara de desverdizacin comercial de la
empresa Furdelca S. A.

En la aplicacin del tratamiento hay que tener en cuenta que el etileno no


solo activa las reacciones implicadas en el cambio de coloracin de la piel del
fruto, sino que, dependiendo de su concentracin y otros factores como temperatura, humedad relativa, concentracin de CO2 y O2 y duracin del proceso, puede incidir en mayor o menor medida en otros procesos metablicos no
deseables que impliquen prdida de calidad del fruto, tales como intensidad
respiratoria, senescencia del fruto, especialmente de su piel54. Algunos de los
problemas que surgen como consecuencia del tratamiento de desverdizacin,
tales como deshidratacin de la zona peripeduncular, ennegrecimiento y cada
del cliz, oscurecimiento y deshidratacin de la corteza, aparecen durante el
perodo de comercializacin y van a acentuarse con el tiempo de almacenamiento posterior al tratamiento (figura 24).

Figura 24. Dao por desverdizacin en mandarina: frutos con cliz verde,
iniciando, negros y cados (de izquierda a derecha, respectivamente).

/ 265 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

Esta tcnica debe aplicarse cuando la madurez interna del fruto cumple
los requisitos mnimos de calidad, y teniendo en cuenta que el fruto haya
iniciado el viraje de color. Por otro lado, es conveniente que las partidas de
fruta que vayan a ser desverdizadas tengan una coloracin homognea, lo
que obliga a realizar una seleccin por color externo previo al proceso. La
tecnologa actual permite realizar la clasificacin por color mediante mquinas que trabajan con clulas fotoelctricas que seleccionan los frutos por
la luz que reflejan. Su uso permite adecuar la duracin del tratamiento en
funcin del color inicial de la fruta, reduciendo la incidencia de alteraciones
por exceso de tratamiento.
En la actualidad, con la ampliacin de mercados, el tiempo de comercializacin se alarga, y las restricciones cuarentenarias exigidas por parte
de otros pases como EE. UU. y Japn implican que las condiciones de
transporte comporten un riesgo para la aparicin de alteraciones. As, la
incorporacin de nuevas tecnologas como es la desverdizacin con baja o
nula concentracin de etileno y con mnima duracin del tratamiento en
funcin del color de destino constituye un objetivo de sumo inters en la
actualidad.
En el Departamento de Postcosecha del IVIA (Valencia, Espaa), se ha
estudiado la respuesta al tratamiento de desverdizacin con baja o nula concentracin de etileno de algunas variedades, y se han obtenido muy buenos
resultados con la desverdizacin sin etileno (figura 25)35, 56.

(a)

(b)

Figura 25. (a) Aspecto de los frutos de mandarina cv. Marisol recin
recolectada (ndice de Color inicial promedio = -2.9). (b) Aspecto de los
mismos frutos desverdizados sin etileno durante 72h a 20C, y posterior
almacenamiento de 21 das a 0,8-1,8C + 7 das a 5C + 7 das a 20C
(simulacin de exportacin a Japn).

/ 266 /

Poscosecha

Salvador et al45, con los datos obtenidos en experiencias con mandarinas


y naranjas tempranas, ofrecen unas recomendaciones de tratamientos de desverdizacin, que se adaptan a los grupos de color que pueden obtenerse en los
almacenes de manipulacin con los calibradores electrnicos actuales (tabla 4).
Tabla 4. Recomendaciones para el tratamiento de desverdizacin de
mandarinas y naranjas de Espaa exportadas a U.E., EE.UU., o Japn
IC inicial
(1000*a/L*b)
IC < -13
-13 > IC < -5
-5 > IC < +3
IC > +3*

U.E.
Mandarinas
No se aplica
72h con etileno
48h con etileno
72h sin etileno
24h con etileno
48h sin etileno

Naranjas
No se aplica
No se aplica

USA-Japn
Mandarinas
Naranjas
No se aplica
No se aplica
48-72h con etileno
No se aplica

72h con etileno

48-72h sin etileno

48-72h con etileno

48h con etileno


72h sin etileno

24h sin etileno

24h con etileno


48h sin etileno

*No se requiere tratamientos de desverdizacin para IC > +7.

El cambio de color de los frutos ctricos en las regiones subtropicales


se produce cuando las temperaturas nocturnas del aire y del suelo son
inferiores a 12,8 y 12,0C, respectivamente; en general, en los climas tropicales estos frutos no alcanzan el color naranja caracterstico debido a que
durante la fase final de su desarrollo no han sido expuestos a bajas temperaturas57, por lo que el tratamiento de desverdizacin se hace interesante
no solo para adelantar produccin, sino tambin para alcanzar el color
naranja tpico de la variedad.
Como se pudo observar en el apartado de Normas de Calidad, el ndice de color ms frecuente para mandarina Clementina en la zona del
suroeste antioqueo (Colombia) se sita entre -11 y -7, muy lejos del
color naranja tpico, aunque organolpticamente se encuentre apta para
consumo (IM =11).
En Colombia se presenta una dificultad aadida, dado que en nuestras
condiciones se encuentran simultneamente todos los estadios fenolgicos de
desarrollo en el rbol; as mientras que en los pases subtropicales se recomienda cosechar para desverdizacin los frutos cuando se ha iniciado el viraje de
color, en Colombia la recomendacin sera realizar la cosecha cuando ms
del 50% de los frutos presenten este estado y posiblemente habra que hacer
varios pases para cosechar los frutos mas retrasados en el desarrollo, lo que
implicara un mayor costo.
/ 267 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

En Colombia, son muy pocos los estudios en desverdizacin de ctricos realizados hasta el momento. En Cenicaf55, evaluaron las condiciones ptimas de
temperatura y concentracin de etileno para el desverdizado de naranja Valencia, producida sobre patrones Sunky x English (SE) y Swingle citrumelo
(CPB), y coloraciones externas 2 y 4 (Norma Tcnica Colombiana NTC 4086).
Los autores recomendaron para naranja Valencia sobre el patrn SE un desverdizado con 8 ppm de etileno, 25C, 85% HR, durante 5-6 das; mientras que
para Valencia sobre CPB recomendaron 12 ppm, 25C, 85%HR, durante un
perodo de tiempo de 8-9 das (figura 26), aunque observaron un incremento
del deterioro fsico de los frutos con la aplicacin de este tratamiento.

Figura 26. Aspecto final de naranja Valencia proveniente de patrn Sunky


x English desverdizada con 8 ppm de etileno y 25C (zq.), y proveniente de
patrn CPB desverdizada con 12 ppm (Der.)55.

Estas concentraciones recomendadas son demasiado elevadas comparadas con


las dosis actuales de etileno aplicadas hoy da en diferentes pases del mundo para
desverdizacin. Como vimos anteriormente, el etileno es eficiente para el cambio
de color de la piel en los frutos ctricos a muy bajas concentraciones. Concentraciones muy altas de etileno provocan graves daos y cambios de calidad en los frutos.
En estudios de frigoconservacin realizados por Corpoica y la Universidad
de Antioquia, se observ un aumento del color inicial en frutos de mandarina
Clementina recolectados con IM 14 y almacenados en atmsfera normal
libre de etileno durante 21 das a 1C y posterior perodo de comercializacin
(7 das a 20C) (figura 27).
El estudio y optimizacin de los tratamientos de desverdizacin en funcin
de las caractersticas iniciales de la fruta se hace necesario en nuestro pas para
una correcta utilizacin de esta tcnica, y para aprovechar todas las ventajas
que la misma representa.
/ 268 /

Poscosecha

(a)
Frutos recin recolectados
Frutos despus de 21 das a 1C
+7 das a 20C das a 1C y 7das a
20C

(b)

Figura 27. Evolucin del color en mandarina Clementina recin recolectada


(a: izq.; b: sup.) y despus del almacenamiento en atmsfera normal libre de
etileno durante 21 das a 1C y 7 das a 20C (a: der.; b: inf.).

Frigoconservacin

La conservacin a baja temperatura es la tecnologa poscosecha ms utilizada y eficaz para alargar el perodo de vida til de frutas y hortalizas.
Mantener las frutas dentro de sus rangos ptimos de temperatura y humedad relativa es el factor ms importante en el mantenimiento de su calidad. La
temperatura de almacenamiento deber ser siempre superior a la del punto de
congelacin para los productos no sensibles al fro y a la temperatura mnima
recomendada para los productos sensibles al fro9.
En el caso de los frutos ctricos el almacenamiento frigorfico o frigoconservacin es utilizado con los siguientes fines:
t Alargar el perodo de comercializacin de las variedades tardas aprovechando perodos favorables de comercializacin.
t Mantener la calidad durante el transporte a mercados distantes.
t Servir de pulmn para abastecer la lnea de almacn en momentos en que
las condiciones climatolgicas (fuertes lluvias, por ej.) no permiten la recoleccin.
t Realizacin de tratamientos cuarentenarios por fro para el control de insectos en frutos exportados a determinados pases que los exigen.
t Dilatar el abastecimiento a las fbricas de derivados de ctricos.
/ 269 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

La aplicacin de bajas temperaturas implica las siguientes consecuencias:


t Reduce la presin de vapor y con ello la velocidad de deshidratacin.
t Disminuye la velocidad de respiracin: por cada descenso de 10C de temperatura esta velocidad se reduce aproximadamente a la mitad, retrasando
la evolucin hacia la senescencia.
t Reduce la velocidad de germinacin de esporas y crecimiento de micelios,
por lo que se retrasa la evolucin de alteraciones patolgicas, y reduce la
contaminacin de los frutos sanos.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que los ctricos, as como otros frutos tropicales y subtropicales, presentan una especial sensibilidad a las bajas
temperaturas, que se manifiesta por distintas alteraciones y manchas en la
piel, conocidas generalmente como lesin de fro, dao por fro o chilling
injury (CI), y que pueden implicar una alta prdida de calidad comercial.
Las distintas especies y variedades de ctricos presentan diferente susceptibilidad a los daos por fro. En general, las naranjas y mandarinas son menos
susceptibles a los daos por fro que las limas, limones y pomelos. Se ha comprobado, que los ctricos con un bajo contenido en compuestos fenlicos y
con una actividad dbil de la polifenol-oxidasa, se muestran ms resistentes a
los daos por fro58.
t En ctricos, los daos por fro pueden mostrar diversas sintomatologas; sin
embargo, los sntomas ms comunes son:
t Picado o Pitting: es la manifestacin ms comn, se caracteriza por depresiones en la piel de forma ms o menos circular con una ligera decoloracin y que posteriormente se oscurecen (figura 28).
t Escaldado: ocurre sobre todo en frutos sobre-maduros y se caracteriza por
un oscurecimiento difuso de la piel de forma irregular que se extiende paulatinamente por la superficie del fruto (figura 29).
t Oil-darkening o Ennegrecimiento de las glndulas oleferas: a la que
puede contribuir la alta humedad del almacenamiento y que cuando este
se prolonga puede extenderse y confundirse con el escaldado.
t Watery break-down: descomposicin acuosa en que los frutos toman
aspecto esponjoso y blando como si se hubiesen congelado (figura 29).
t Membranosis o pardeamiento del albedo y membranas de los carpelos en
limones (figura 29).
/ 270 /

Poscosecha

t En casos severos tambin puede ocasionar prdida de sabor y mayor susceptibilidad a las podredumbres59, 60, 74

Figura 28. Pitting en naranja y pomelo.


Fuente: Martnez60

Figura 29. Escaldado en naranja Salustiana, pardeamiento de albedo


en limn y descomposicin acuosa en pomelo.

La manifestacin de los sntomas de daos por fro puede iniciarse en


la misma cmara de conservacin, siempre despus de un cierto tiempo de
permanencia en fro. El riesgo de la aparicin de sntomas es tanto mayor,
cuanto mayor es el tiempo de permanencia en cmara y menor la tempe/ 271 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

ratura, y estos se manifiestan totalmente cuando la fruta es transferida a


temperatura ambiente. En algunas ocasiones estos sntomas no se hacen
visibles mientras la fruta permanece en cmara, y se manifiestan solamente
a la salida de la misma61.
Las respuestas a los daos por fro son reversibles para tiempos de exposicin cortos, pero en caso contrario los daos son irreversibles62. Los ctricos
conservados a temperaturas crticas manifiestan un incremento de su actividad respiratoria cuando son trasladados a temperatura ambiente63. Entre los
diversos parmetros relacionados con los daos por fro estudiados podemos
citar la prdida de electrlitos, emisin de aceites esenciales como d-limoneno, activacin de enzimas relacionadas con el metabolismo de fenoles como
la fenilalanina amonio-liasa (PAL), produccin de etileno, respiracin y contenido de voltiles (acetaldehdo y etanol)64.
A pesar de que las bajas temperaturas y la susceptibilidad varietal a las mismas son determinantes en la aparicin de daos por fro, existen otros factores
capaces de modificar la tendencia a su manifestacin. Entre ellos cabe citar65:
t Momento de recoleccin: en general, los frutos maduros toleran temperaturas ms bajas que los frutos inmaduros. Para pomelo, por ejemplo,
se ha demostrado que son ms susceptibles los frutos cosechados tanto al
principio como al final de la campaa.
t Zona de cultivo: se han encontrado diferencias debidas a caractersticas
climticas y culturales. Por ejemplo, los frutos de zonas calientes son ms
sensibles que los frutos de zonas fras.
t Tamao del fruto: en general son siempre ms susceptibles los de pequeo
dimetro.
t Posicin del fruto en el rbol: son ms susceptibles los frutos cosechados
en la parte externa.
En la tabla 5, se presentan recomendaciones para condiciones ptimas
de almacenamiento y respectivo perodo de vida til para frutos ctricos. En
general, la humedad relativa debe estar cerca del 90% y la renovacin de
aire debe asegurar que el nivel de etileno sea inferior a 1 ppm. Sin embargo,
no hay que olvidar que estas recomendaciones se aplican para el pas donde fueron ensayadas, y que para el caso especfico de Colombia haran falta
evaluaciones para determinar con exactitud las condiciones ptimas de almacenamiento para especies/variedades cultivadas en el pas y en funcin de la
zona de cultivo.
/ 272 /

Poscosecha

Cuando no hay otra posibilidad, los frutos ctricos se pueden almacenar


junto con frutas tropicales como la papaya, el mango, la guayaba y la pia por
encima de 10C a 90% de humedad relativa en la misma cmara de frigoconservacin, y nunca se deberan almacenar junto a cebollas, coles, o ajos.
Tabla 5. Condiciones de almacenamiento recomendadas para ctricos.
Temperatura (C)

Humedad relativa (%)

Perodo de almacenamiento (semanas)

Naranja Sanguiniea

5-7

85-90

8-10

Valencia
(California y Arizona)

39

8590

48

Valencia (Florida y Texas)

12

8590

812

Valencia, Navel (Spain)

23

8590

48

Washington Navel
(California)

57

8590

Shamouti

56

8590

812

Especie / Cultivar
(1) Naranja dulce

(2) Mandarinas
y hibridos
Ponkan

46

8590

45

Satsuma

23

8085

1218

Clementina

34

8590

46

Clementina (Espaa)

45

8590

Ellendale,
Murcott, Nagpur

67

8590

6-8

Temple, Orlando, Dancy

46

90-95

2-5

Kinnow mandarin

3-4

8590

8-12

Verde oscuro

13-14

8590

16-24

Verde claro

13-14

8590

8-16

Amarillo

10-12

8590

3-4

9-10

90-95

6-8

Texas y Florida grapefruit

10

90-92

California y
Arizona grapefruit

14-15

90

5-6

Foster, Ruby,
Saharanpur Special

9-10

90

16-20

(6) Pomelo

8-9

85-90

10-12

(3) Limones

(4) Limas
Tahit
(5) Toronja

Fuente: Ladaniya66

/ 273 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

En Antioquia, se han adelantado estudios de frigoconservacin en mandarina Clementina. Carvalho et al50 observaron daos por fro en ambos frutos
de mandarina Clementina con dos ndices de madurez (10 y 13), almacenados durante de 2 semanas a 4C y 7 das a 20C (figura 30).

Figura 30. Frutos de mandarina Clementina (M 10 y 13) con sntomas de


dao por fro (pitting con oleocelosis) despus de 2 semanas
a 4C mas 7 das a 20C.

Adems, en esta experiencia se observ que los factores: ndice de madurez


y tiempo de almacenamiento fueron significativos para casi todos los descriptores sensoriales analizados por un panel sensorial de 8 catadores entrenados,
as como su interaccin. Los frutos ms verdes presentaron un contenido de
cido ascrbico y de polifenoles totales significativamente mayor, diferencias
que se mantuvieron hasta el final del perodo de almacenamiento. El contenido
en hesperidina tambin fue superior en los frutos ms verdes, sin embargo, su
contenido disminuy durante el almacenamiento en fro, y aument cuando los
frutos se trasladaron a 20C, probablemente como respuesta al estrs por fro.
El almacenamiento en fro no afect de manera significativa los parmetros de
Brix y acidez, sin embargo, el rendimiento en zumo fue afectado por el tiempo
de almacenamiento, as como el descriptor de calidad general del zumo en el
anlisis sensorial, por lo que se deben evitar perodos largos de almacenamiento.
/ 274 /

Poscosecha

Hay que tener en cuenta que la duracin del almacenamiento puede estar afectada por factores pre-recoleccin como patrn, condicin del rbol,
prcticas culturales, momento de la recoleccin, climatologa, y manipulacin
poscosecha (retraso entre recoleccin y enfriamiento, tratamientos fungicidas,
recubrimientos, entre otros)67.
El ndice de madurez en el momento de cosecha es determinante en la
duracin del almacenamiento para mandarinas, naranjas y tangelos, debido a
que durante la frigoconservacin se produce un incremento del mismo, como
consecuencia de la disminucin del contenido de acidez, que puede alcanzar
valores que correspondan a sabores de una cierta insipidez68.
Algunos autores relacionan el sabor con los slidos totales y el ndice de madurez en un grfico en forma de lengua (figura 31) que delimita la aceptabilidad
y que, lgicamente, estar influenciado por la variedad y tipo de consumidor.
Adems, ndices de madurez inicial altos suelen ir unidos a altas concentraciones
de voltiles al final de la conservacin con la consiguiente repercusin negativa en
el sabor-aroma. Los cambios en el ndice de madurez no son tan determinantes
en la duracin de la conservacin de limas, limones y pomelos56. En la utilizacin
de este diagrama se debe tener en cuenta que este fue elaborado a partir de zumo
y no de fruta fresca, y para determinadas variedades de mandarinas.

Figura 31. Diagrama de lengua de Pritchett con limites de aceptabilidad


del sabor de mandarinas Clementina.

/ 275 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

La sensibilidad al fro de algunas variedades puede reducirse con la utilizacin


de tcnicas como las de acondicionamiento a media o alta temperatura, calentamiento-enfriamiento intermitente y utilizacin de recubrimientos66, 67, 69, 70.
La falta de una refrigeracin adecuada durante la comercializacin de un
producto puede llegar a suponer importantes prdidas, valoradas en un 40%
en caso de frutas y verduras71. La cadena de fro no es algo menor y juega un
papel primordial dentro de la cadena de abastecimiento, a fin de evitar errores
y deficiencias que pueden ser determinantes cuando se aumentan los servicios
relacionados con la logstica.
El concepto conocido como cadena de fro no es ms que la sucesin de
procesos logsticos (almacenaje, distribucin, embalajes, transporte, carga y
descarga) con una temperatura y humedad relativa controlada, desde el mismo momento inicial de la produccin del producto, hasta el punto de venta
final. Los eslabones de la cadena de fro son:
t Pre-enfriamiento o almacenamiento en fro previo al transporte.
t Transporte refrigerado.
t Cmara refrigerada en los puntos de venta.
t Exhibicin y venta en un equipo refrigerado.
Se debe recalcar que la ausencia o fallo que se cometa en alguna de estas
etapas dentro de la estructura logstica repercute negativamente en la calidad
final del producto.
Uno de los inconvenientes que tiene el mantenimiento de la cadena de fro
es el elevado coste que representa, sin embargo, hay que tener en cuenta que
la inversin realizada repercutir positivamente en los beneficios obtenidos.

Conclusiones y recomendaciones
Actualmente, en Colombia se estn cosechando los frutos ctricos con un
ndice de madurez muy alto, cuando se podra cosechar con ndices ms bajos, y aprovechar las calidades nutricionales de los frutos menos maduros, as
como su mayor resistencia a la manipulacin y mayor perodo de vida til.
En este momento, en el pas se requieren alternativas para las ceras comercializadas para ctricos, el proceso no se emplea de una forma adecuada y el
sector productivo no ha entendido su importancia. Deben realizarse estudios
y evaluaciones de ceras y recubrimientos en funcin de la especie / variedad,
/ 276 /

Poscosecha

ndice de madurez, localidad y almacenamiento y comercializacin, as como


del proceso de aplicacin. Igualmente, son necesarias campaas de educacin
con apoyo del gobierno para sensibilizar a los productores, comercializadores
y consumidores de su importancia y de las ventajas que representan para los
alimentos y para la cadena de distribucin. Adems, falta una regulacin nacional sobre ceras y recubrimientos a aplicar en alimentos, lo que fomenta la
competencia desleal y pone en causa la seguridad de los consumidores.
La floracin continua en el ao frustra la transferencia y aplicacin de tecnologas poscosecha ampliamente utilizadas en otros pases, dificulta la uniformidad del producto, exige un mayor costo en jornadas de recoleccin, y dificulta y ralentiza el proceso de cosecha. Es necesario el estudio y la evaluacin
en campo de alternativas como mejoramiento vegetal, la poda o la aplicacin
de reguladores del crecimiento, con la finalidad de concentrar floraciones en
el ao que faciliten el manejo poscosecha y un aumento de la competitividad.
Urge una norma tcnica nacional para mandarinas Clementinas, as
como campaas de degustacin y marketing para educar a los consumidores
(especial nfasis en los nios) sobre las ventajas e calidades de este grupo de
cultivares ctricos.
La desverdizacin es una tcnica que permite alcanzar colores ms atractivos
para los frutos ctricos, factor primordial en el caso de la exportacin. Adems,
permite adelantar la produccin y obtener precios de mercado ms altos. Es
necesario el estudio y la evaluacin en campo para la definicin de protocolos
nacionales de acuerdo con la especie / variedad, ndice de madurez y localidad.
El almacenamiento en fro es la tcnica ms sencilla y eficaz hasta hoy
en el control de enfermedades de poscosecha, permite escalonar y romper
la estacionalidad de la oferta, obtener mejores precios y tambin prolongar
el perodo de vida til conservando la calidad. Al igual que en el caso de la
desverdizacin, hace falta el establecimiento de protocolos para una adecuada
refrigeracin comercial.
Cualquier tentativa para mejorar el manejo del producto durante la poscosecha debe ser precedida de una estimacin cuantitativa de las prdidas que
acarrea el proceso que se pretende mejorar. Esto determinar los imperativos
econmicos y sociales de actuacin y permitir que cualquier estrategia de
intervencin sea accesible en trminos de costo / beneficio.
Por razones econmicas y cientficas se deben dedicar mayores esfuerzos
a la mejora de las condiciones de manipulacin, transporte, conservacin y
/ 277 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

distribucin para optimizar la cantidad y calidad de la oferta citrcola colombiana en vez de tratar de incrementar la oferta aumentando los recursos productivos. La solucin idnea para preservar la calidad global (organolptica,
comercial, microbiolgica, nutritiva y sensorial) de los frutos y satisfacer las
crecientes exigencias de los mercados internacionales consiste en mejorar los
tratamientos poscosecha.
Todas las estrategias para reducir las prdidas poscosecha y optimizar los
procesos requieren de una cooperacin transdisciplinar eficaz en la investigacin
y de una articulacin eficiente entre el sector poltico, productivo, empresarial,
industrial y acadmico.
En Colombia, es urgente una poltica nacional para solucionar los siguientes
problemas, sin los cuales no es posible ser competitivo en la etapa de poscosecha:
t Infraestructuras: vas de acceso, centrales hortofrutcolas, cadena de fro,
entre otros.
t Logstica y cercana de los puertos.
t Agremiacin: permite manejar protocolos de calidad, estrategias logsticas,
concentracin de la produccin, continuidad de la oferta por un perodo
ms prolongado, mayor fuerza de negociacin y mayor estabilidad de precios en el mercado.
Referencias bibliogrficas
1. COLOMBIA. MINISTERIO DE AGRICULTURA Y DESARROLLO RURAL Observatorio Agrocadenas Colombia. Documento de trabajo no. 107. La
cadena de ctricos en colombia: Una mirada global de su estructura y dinmica
1991-2005. Bogot D. C.: El Ministerio, 2005. 64 p.
2. WILLS, R.; et al. Postharvest: an introduction to the physiology and handling
of fruit, vegetables and ornamentals. 4th ed., Sydney, Wallingford: CAB International, UNSW Press, 1998. 262 p.
3. KADER, Adel. Fruit maturity, ripening, and quality relationships. En: Acta
Horticulurae. 1999. Val. 485. p. 203-208.
4. BURDON, J. N. Postharvest handling of tropical and subtropical fruit for export. In: S. Mitra (ed.) Postharvest physiology and storage of tropical and subtropical fruits. CABI, 1997. p. 1-19.
5. KADER, Adel A. Postharvest Technology of Horticultural Crops, 2nd Edn.
Oakland, CA: University of California - Division of Agriculture and Natural
Resources. 1992. 537 p.
/ 278 /

Poscosecha

6. BRADY, C. J. Fruit ripening. En: Annu. Rev. Plant Physiol. 1987. Vol. 38. p.
155-178.
7. GRIERSON, W. Senescence in fruits. En: HortScience. 1987. Vol. 22, No. 5.
p. 859-862.
8. ARPAIA, M. L. And KADER, A. A. Recomendations for maintaining postharvest quality. [En lnea]. Oakland, CA: Universidad de California, 2000. [Citado
el 15 de junio de 2011]. Url disponible en: http://postharvest.ucdavis.edu/produce/producefacts/fruit.html
9. KADER, Adel A. Postharvest biology and technology: an overview. In: Postharvest Technology of Horticultural Crops. 2a ed. Division of Agriculture and
Natural Resources. University of California, 1992. p. 15-19.
10. ________. Respiration and gas exchange of vegetables. In: Postharvest Physiology of Vegetables. WEICHMANN, J. (Ed.). New York, USA: Marcel Dekker,
1987.
11. CUQUERELLA, J. Efectos de distintos recubrimientos creos y plsticos en la
fisiologa post-recoleccin y en la calidad de frutos ctricos. Tesis doctoral. Valencia, Espaa: Universidad Politcnica de Valencia, 1990. 204 p.
12. MACHADO-QUEVEDO, J.; MARTNEZ-JVEGA, J. M. and ALEIXANDRE, J. L. Effects of films wrapping on keeping quality of fruit and vegetables.
En: II World Congress of Food Technology, 1987. p. 1205-1218.
13. DAVIS, P. L. and HOFMANN, R.C. Effects of coatings on weight loss and
ethanol build-up in juice of oranges. En: J. Agr. Food Chem. 1973. Vol. 21. p.
455-458.
14. JIMNEZ-CUESTA, M.; CUQUERELLA, J. y MARTINEZ-JVEGA, J. M.
Los recubrimientos plsticos en la comercializacin de los ctricos. Levante Agrcola. 1983. No. 247-248. p. 168-172.
15. BEN-YEHOSHUA, S. Gas exchange, transpiration and the commercial deterioration of orange fruit in storage. J. Amer. Soc. Hort. Sci.1969. Vol. 94. p.
524-526.
16. HAAS, A. R. C. and KLOTZ, L. J. Physiological gradient in citrus fruits. En:
Hilgardia. 1935. Vol. 9. p.181-217.
17. YANG, S. F. Biosynthesis and action of ethylene. HortScience. 1985. Vol. 20,
No. 1. p. 41-45.
18. REID, M. S. Biologa de la produccin del etileno. En: Maduracin de Frutos.
Eds. Postharvest Outreach Program. Department of Pomology. Davis, California: University of California, 1998. p.3-4.
/ 279 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

19. McGLASSON, W. B. Ethylene and fruit ripening. En: Hort Science. 1985. Vol.
20, No. 1. p. 51-54.
20. KADER, A. A. Fruits in the global market. In: Fruit quality andits biological
basis. Michael Knee (Ed.). UK : Sheffield Academic Press, 2002. p. 294.
21. ARPAIA, M. L. Preharvest factors influencing postharvest quality of tropical and
subtropical fruit. En: HortScience. 1994. Vol. 29. p. 982-985.
22. CRISOSTO, C. H.; JOHNSON, R.S. and DEJONG, T. Orchard factors affecting postharvest stone fruit quality. En: HortScience. 1997. Vol. 32. p. 820-823.
23. FERGUSON, I.; VOLZ, R. and WOOLF, A. Preharvest factors affecting physiological disorders of fruit. En: Postharvest Biology and Technology. 1999. Vol.
15. p. 255-262.
24. MATTHEIS, J. P. and FELLMAN, J. K. Preharvest factors influencing flavor of
fresh fruits and vegetables. Postharvest Biology and Technology. 1999. Vol. 15.
p. 227-232.
25. IQBAL, N. and KARACALI, I. Flowering and fruit set behaviour of Satsuma
mandarin (Citrus unshui Marc.) as influenced by environment. Pakistan. En:
Journal of Biological Science. 2004. Vol. 7, No. 11. p. 1832-1836.
26. GOULD, W. P. A hot water/cold storage quarantine treatment for grapefruit
infested with de Carribean fruit fly. En: Pmc. Fla. State Hort. Soc. 1988. Vol.
101. p. 190-192.
27. GUERRA, F. Tecnologa post-cosecha de frutos ctricos. Curso integral de citricultura. Cuba: Instituto de Investigaciones de Fruticultura Tropical. 1996. p. 242-257.
28. TING, S. V.and ROUSSEFF, R. L. Vitamins In: Ting S. V., Rousseff R. L. (Eds)
Citrus fruit and their products: analysis and technology. New York, USA: Marcel
Dekker, 1986. p. 121-136.
29. ARPAIA, M. L. and KADER, A. A. Produce Facts: mandarin-tangerine; recommendations for maintaining postharvest quality. Davis: University of California,
Postharvest Technology Research and Information Center, 1999. p. 2.
30. FOMESA. Factores de calidad Nociones previas Definicin de calidad. [En
lnea]. Valencia, Espaa: Fomesa, 2007. [Citado el 25 de junio de 2011]. Url
disponible en: http://www.fomesa.com/Calidad/Calidad2.htm.
31. JIMNEZ-CUESTA, M.; CUQUERELLA, J. and MARTNEZ-JVEGA, J.
M. Determination of a color index for citrus fruit degreening. [En lnea]. Proceedings of the International Society of Citriculture, 1981. Vol. 2. . 750-753.
[Citado el 15 de mayo de 2011] Url disponible en: http://noticias.agroterra.
com/citricos/com-valenciana-agricultura-desarrolla-un-medidor-del-color-delos-citricos-de-facil-manejo/9472
/ 280 /

Poscosecha

32. CUQUERELLA, J.; et al. Nuevo sistema de medida de color para ctricos. En:
Rev. Levante Agrcola. Especial Postcosecha. 2004. No. 372. p. 298-304.
33. SINGH, K. K. and REDDY, B. S. Measurement of mechanical properties of
sweet orange. En: J. Fd. Sci. Technol. 2006. Vol. 42. p. 442445.
34. ALONSO, M.; DEL RO, M. A. y JACAS, J. Carbon dioxide diminishes
cold tolerance of third instar larvae of Ceratitis capitata Wiedemann (Diptera: Tephritidae) in Fortune mandarins: implications for citrus quarantine treatments. En: Postharvest Biology and Technology. 2005. Vol. 36.
p.103111.
35. CARVALHO, C. P.; et al. Efecto del tratamiento de desverdizacin en la calidad
de mandarinas Oronules con vistas a la exportacin a Japn. Revista Iberoamericana de Tecnologa Postcosecha. 2006. Vol. 7, No. 2. p. 104-108.
36. INDECOPI. NORMA PNTP 011.023/2006. Ctricos (mandarinas, tangelos,
naranjas y toronjas). Proyecto de Norma Tcnica Peruana. Lima, Per: Comisin
de Reglamentos Tcnicos y Comerciales, 2006.
37. AOAC. Official methods of analysis of the Association of Official Analytical
Chemists. 15th ed. Arlington, VA: Association of Official Analytical Chemists,
1990. p. 1058-1059
38. NORMAN, S. M. The role of volatiles in storage of citrus fruits. En: Proceedings of the International Society of Citriculture. 1977. Vol. 1. p. 238-242.
39. SARIG, Y.; et al. Non-destructive seed detection in citrus fruits. En: Proc. Int.
Soc. Citric. Italy. 1992. p. 10361039.
40. GOLDSCHMIDT, E. E. Effect of climate on fruit development and maturation. In: S.H. Futch and W. J. Kender (eds.) Citrus Flowering and Fruiting
Short Course. Florida, USA: Univ. of Florida - Citrus Research and Education
Center, 1997. p. 93-97.
41. REUTHER, W. Climatic effects and quality of citrus fruits in the tropics. En:
Proc. Amer. Soc. Hort. Sci. Trop. Reg. 1980. Vol. 24. p. 15-28.
42. DIXON, R. A. and PAIVA, N. L. Stress-induced phenylpropanoid metabolism.
En: Plant Cell. 1995. Vol. 7. p. 10851097.
43. HUANG, R.; et al. Antioxidant activity and oxygen-scavenging system in orange pulp during fruit ripening and maturation. En: Scientia Horticulturae. 2007.
Vol. 113, No. 2. p. 166-172.
44. CONESA, E. Equipos y funciones de las lneas de manipulacin en centrales
hortofrutcolas. IV Curso Internacional Tecnologa Poscosecha y Procesado Mnimo. Cartagena, Espaa: ETSIA-UPCT, 2010.
/ 281 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

45. SALVADOR, A.; NAVARRO, P. y MARTNEZ-JVEGA, J. M. Tecnologa


postcosecha de ctricos. En: XI Simposium Internacional de Citricultura La
citricultura mexicana en el siglo XXI. [Cd room]. Victoria Tamaulipas, Mxico,
2007.
46. BALDWIN, E. A.; et al. Effect of coatings and prolonged storage conditions on
fresh orange flavor volatiles, degrees brix, and ascorbic acid levels. En: J. Agric.
Food Chem. 1995. Vol. 43. p. 1321-1331.
47. HAGENMAIER, R. D. and BAKER, R. A. Citrus fruit with single or layered
coatings compared with packinghouse-coated fruit. En: Proc. Fla. State Hort.
Soc. 1993. Vol. 106. p. 238-240.
48. HAGENMAIER, R. D. and BAKER, R. A. Internal gases, ethanol content and
gloss of citrus coated with polyethylene wax, carnauba wax, shellac or resin at
different application levels. En: Proc. Fla. State Hort. Soc., 1994. Vol. 107. p.
261-265.
49. TAO QUMICA. Aplicacin de ceras para ctricos en Colombia. Oficinas TAO
Qumica S. A. S. Medelln. Entrevista personal. 2011.
50. CARVALHO, C. P.; et al. Efecto del almacenamiento en fro sobre la calidad y
contenido de antioxidantes de los frutos de mandarina Clementina. Corporacin Colombiana de Investigacin Agropecuaria, CORPOICA y Universidad
Pontificia Bolivariana, UPB (Eds.). En: Memorias VII Seminario Internacional
de Frutas Tropicales. Agroindustria e Innovacin, 2010. p. 37-38.
51. MARTNEZ-JVEGA, J. M.; SALVADOR, A. and NAVARRO, P. Tecnologa
postcosecha de frutos ctricos. IV Curso Internacional Tecnologa Poscosecha y
Procesado Mnimo. Cartagena, Espaa: ETSIA UPCT. 2010.
52. SARGENT, S. A.; et al. Handling, cooling and sanitation techniques for maintaining postharvest quality. In: Vegetable Production Handbook. Chapter 18.
Florida, USA: Horticultural Sciences Dept. University of Florida. IFAS extensin, 2007. p. 97-99.
53. SNCHEZ, L. A.; JARAMILLO, C. and TORO, J. C. Fruticultura Colombiana Ctricos. Manual de Asistencia Tcnica ICA. Bogot: ICA, 1987. p. 88.
54. CUQUERELLA, J.; NAVARRO, P. y SALVADOR, A. Respuesta a la desverdizacin de nuevas variedades de ctricos. En: Revista Levante Agrcola. 1999.
Especial Postcosecha. No. 348. p. 263-271.
55. PINEDA, R.; RIAO, N. y SIERRA, C. Desverdizacin y control de los factores
de desverdizacin de naranja Valencia. Fondo Nacional de Fomento Hortofrutcola, Asociacin Nacional de Productores de Ctricos (Asoctricos), Cenicaf
(Centro Nacional de Investigacin en caf Pedro Uribe Meja, Asociacin Hortofrutcola de Colombia (Eds). Bogot, Colombia: Produmedios, 2004. 16 p.
/ 282 /

Poscosecha

56. MARTNEZ-JVEGA, J.; et al. Optimizacin del manejo de clementinas tempranas con vistas a la exportacin a Japn. En: Actas del IV Simposio Ibrico,
Maduracin y Postcosecha. Oeiras, Portugal. 2004. p. 285-290.
57. CASAS, A. y MALLENT, D. El color de los frutos ctricos. I. Generalidades. II.
Factores que influyen en el color. Influencia de la especie, de la variedad y de la temperatura. En: Rev. Agroqum. Tecnol. Aliment. 1988. Vol. 28, No. 2. p. 184-202
58. GRIERSON, W. Physiological disorders of citrus fruits. En: Proceedings of the
International Society of Citriculture. 1981. Vol. 2. p. 764-767.
59. CUQUERELLA, J.; MARTNEZ-JVEGA, J. M. y JIMNEZ-CUESTA, M.
Frigoconservacin de ctricos. En: Hoja Tcnica INIA. 1983. No. 45. p.20.
60. MARTNEZ, J. A. Alteraciones fisiolgicas, microbianas y daos mecnicos en
la post-recoleccin hortofrutcola. IV Curso Internacional Tecnologa Poscosecha y Procesado Mnimo. Cartagena, Espaa: ETSIA-UPCT. 2010.
61. MARTNEZ-JVEGA, J. M. Frigoconservacin de ctricos. I Simposio Nacional de Tecnologa Postcosecha. Montevideo, Uruguay, 1993. p. 72-82.
62. CHIEN YI WANG, L. Physiological and biochemical responses of plants to
chilling injury stress. En: HortScience. 1982. Vol. 17, No. 2. p. 169-186.
63. LYONS, J. M. Chilling injury in plants. En: Annual Review of Plant Physiology.
1973. Vol. 24. p. 445-466.
64. VZQUEZ, D. y MARTNEZ-JVEGA, J. M. Determinacin de parmetros
relacionados con la sensibilidad al fro de frutos ctricos. Subprograma XI Tratamiento y conservacin de alimentos. Medicin de la calidad en frutos tropicales y subtropicales con tratamientos fsicos de cuarentena. Ponencia No. 4.
CYTED, 1997. p. 12.
65. MARTNEZ-JVEGA, J. M. y CUQUERELLA, J. Alteraciones fisiolgicas
en la post-recoleccin de frutos ctricos (2 parte). En: Fruticultura Profesional
Mar/Abr 1995. No. 69. p. 57-65.
66. LADANIYA, M. Citrus Fruit: Biology Technology and Evaluation. USA: Elsevier, 2008. p. 336.
67. MARTNEZ JVEGA, J. M. Estado actual de las aplicaciones del fro en la
poscosecha de ctricos. En: Actas del I Congreso Espaol de Ciencias y Tcnicas
del Fro. Eds. Lpez, A., Esnoz, A., Arts, F. 2002. p. 433-442.
68. MAZZUZ, C. F. y DEL RO, M. A. Aplicacin del anlisis sensorial al control
de calidad de frutos ctricos sometidos a tratamientos cuarentenarios. Workshop
Medicin de la calidad en frutos tropicales y subtropicales con tratamientos de
cuarentena. Proyecto XI.10 Ed. C. Saucedo y J.M. Martnez-Jvega. CYTED,
1997. p: 16-28.
/ 283 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Pilar Navarro, Alejandra Salvador

69. RODOV, V.; et al. Reducing chilling injury and decay of stored citrus fruit by
hot water dips. En: Postharvest Biology and Technology. 1995. Vol. 5. p. 119127.
70. JOHN-KARUPPIAH, K. J.; et al. Short-duration, hot-water treatment for the
control of chilling injury and postharvest decay in citrus. En: Proc. Fla. State
Hort. Soc. 2004. Vol. 117. p. 403-407.
71. KAMINSKI, W. Refrigeration and the world food industry. Paris: IIR, 1995.
33 p.
72. FERRATO, J.A., et al. Incidencia de una nueva prctica de cosecha sobre la calidad poscosecha de frutos de tomate en dos grados de madurez. En: Horticultura
Argentina. 2010. Vol. 29, No. 70, p. 12-17.
73. MOLINA, M.C. Estudio de la conservacin de la naranja variedad valencia (C.
sinensis Osbeck) encerada a dos temperaturas de almacenamiento. En: Inventario de las investigaciones realizadas en poscosecha de productos agrcolas en la
Universidad Nacional de Colombia, sede Bogot. (Eds. Villamizar, F., Galvis, A.,
Miranda, D., Ospina, J., Perea, M., Restrepo, P., Flrez, V.). 2004. p. 68.
74. WARDOWSKI, W.F., NAGY, S., GRIERSON, W. Fresh citrus fruits. Avi Westport, Connecticut: Publishing Company, Inc. 1986. 571 p.

/ 284 /

Captulo 10 / Chapter 10

Control de enfermedades de
poscosecha
Catarina P. Pssaro Carvalho*
Carla Nunes**
Llus Palou***

ng. Agrnoma. Ph.D. en


ng. de Alimentos. C.. La
Selva, Corporacin Colombiana de nvestigacin Agropecuaria (COROPOCA), km
7 va Las Palmas, Vereda
Llanogrande, Rionegro, Antioquia, Colombia.
** ng. Hortofruticola. Ph.D.
en Agronomia. Universidade do Algarve. nstituto de
Cincias Agrrias e Ambientais Mediterrnicas (CAAM). FCT, Ed. 8, Campus de
Gambelas, 8005-139 Faro,
Portugal.
*** Ph.D. en ng. Agrnoma
Centro de Tecnologa Poscosecha, nstituto Valenciano
de nvestigaciones Agrarias
(VA), Apartado Oficial,
46113 Moncada, Valencia,
Espaa.
Correspondencia:
Catarina Pedro Pssaro
Carvalho
[email protected]

Resumen
Las enfermedades de poscosecha pueden representar
hasta prdidas econmicas del 80% en el sector citrcola. Estas prdidas son muy variables y dependen
de mltiples factores: zona de produccin, especie y
cultivar, edad y condicin de los rboles, condiciones
climatolgicas durante toda la campaa, poca y forma de recoleccin, manejo de los frutos en poscosecha,
condiciones de almacenamiento y mercado de destino.
Los tratamientos ms comunes para el control de estas
enfermedades son los fungicidas sintticos. Sin embargo, la aplicacin masiva y continuada durante aos de
materias activas similares (tiabendazol, imazalil, entre
otros.) ha generado graves preocupaciones a los consumidores y a las entidades gubernamentales debidas, entre otros motivos, a la contaminacin generada por un
exceso de residuos qumicos y a la proliferacin de cepas
patognicas resistentes. Adems, hay un marcado cambio de tendencia en la comercializacin de productos
hortofrutcolas hacia los mercados de productos ecolgicos u orgnicos y, al mismo tiempo, los mercados tradicionales estn exigiendo el cumplimiento de criterios
propios ms restrictivos que los lmites mximos de residuos (LMR) establecidos por la legislacin. Todo ello ha
conducido a la bsqueda de alternativas a los agroqumicos para el control de las enfermedades de poscosecha.
/ 285 /

Catarina P. Pssaro Carvalho, Carla Nunes, Llus Palou

En este captulo se aborda el control mediante estrategias de CINCEP


(control integrado no contaminante de enfermedades de poscosecha),
que se basan en el conocimiento profundo de la epidemiologa de los
patgenos y de los factores que determinan su incidencia en precosecha, cosecha y poscosecha para incidir de forma global sobre el problema actuando sobre cada uno de estos factores en el momento adecuado
para minimizar las prdidas econmicas. En general, es importante cosechar con el ndice de madurez adecuado, siempre con tiempo seco y
de forma extremadamente cuidadosa para minimizar heridas en la piel
y otros daos fsicos. En poscosecha se requieren tratamientos o combinaciones de tratamientos alternativos que, segn su naturaleza, pueden
ser fsicos, qumicos de baja toxicidad y biolgicos.
Entre los tratamientos fsicos se destacan el calor (curado, agua caliente), las irradiaciones (luz UV-C) o los choques gaseosos. Los principales
tratamientos qumicos alternativos se basan en la aplicacin de sustancias naturales (extractos de plantas, aceites esenciales), aditivos alimentarios o recubrimientos comestibles antifngicos. El control biolgico
consiste en la aplicacin controlada de microorganismos antagnicos
a los patgenos.
Palabras clave: ctricos, enfermedades, agentes patgenos, tratamiento.
Postharvest diseases control
Abstract
Postharvest diseases can represent up to 80% of the economic loses in
the citrus sector. These loses can vary a lot, and depend on several factors: The zone of the production, the species and the cultivar, age and
condition of the trees, weather conditions during the whole campaign,
time and way of the recollection, handling of the products during the
postharvest, storage conditions and final market.
The most common treatments for the control of those diseases are the
synthetic fungicides, but their massive and continuous application of
similar active matters (thiabendazole, imazalil, among others) has generated grave concerns to consumers and to the government authorities due to, among other reasons, contamination generated by an excess
of chemical waste and the proliferation of resistant pathogenic strains.
Besides, there is a strong shift in the trends for the commercialization
of horticultural and fruit products to the ecologic or organic markets
and, at the same time, traditional markets are demanding the fulfillment of more restrictive criteria which go beyond the maximum waste
limits established by law. All of these facts have contributed to the
/ 286 /

Control de enfermedades de poscosecha

search for alternatives to replace agro chemical products for the control
of postharvest diseases.
In this chapter, CINCEPs (Spanish acronym for not-contaminant
postharvest diseases integrated control) control strategies is approached. Those strategies are based on the profound knowledge of
the pathogens epidemiology and on the factors that determine their
incidence before, during and after the harvest, in order to globally impact the problem, acting on each one of the factors mentioned at the
appropriate moment to minimize economic loses. In general, it is important to harvest with the adequate maturity index, always under a
dry weather and with a strict care to minimize skin wounds and other
physical damages. During postharvest, treatments or mixtures of alternative treatments of a physical, chemical -with a low toxicity level- and
biological order, are required.
Among the physical treatments, some can be remarked: Heat (curing,
hot water), irradiations (UV-C light) or gas shocks. The main alternative chemical treatments are based on the application of natural substances (extracts of plants, essential oils) alimentary additives or edible
anti-fungal covers. The biological control consists on the controlled
application of micro organisms that have an antagonistic role against
pathogens.
Key words: citrus, diseases, agents pathogens, treatment.

ntroduccin
Las enfermedades de poscosecha, es decir, aquellas que afectan a los frutos
desde que son recolectados hasta que llegan al consumidor, provocan prdidas econmicas importantes a nuestro sector citrcola. La tendencia actual
es restringir el nombre de enfermedades a las que son de origen parasitario,
producidas por un organismo vivo, y designar como alteraciones o desrdenes
a los problemas de origen abitico o fisiolgico. En poscosecha de ctricos, la
gran mayora de los agentes patgenos causantes de enfermedades son hongos
filamentosos y la sintomatologa que producen en los frutos son las podredumbres, trmino que se utiliza para nombrar las propias enfermedades.
Las prdidas provocadas por las enfermedades son muy variables y dependen
del rea productora, la especie y el cultivar, la edad y condicin de los rboles, las
condiciones climatolgicas durante toda la campaa, la poca y forma de recolec/ 287 /

Catarina P. Pssaro Carvalho, Carla Nunes, Llus Palou

cin, el manejo de los frutos en poscosecha, las condiciones de almacenamiento


y el mercado de destino. En el mbito mundial destacan las prdidas producidas
por patgenos de herida estrictos como Penicillium digitatum Sacc. o Penicillium
italicum Wehmer, causantes, respectivamente, de las podredumbres verde y azul
(figura 1). La incidencia de estas podredumbres es general y elevada (normalmente ms del 80% del total de prdidas por podridos) y, por tanto, constituyen
el eje bsico de cualquier estrategia de control de enfermedades de poscosecha de
ctricos. La infeccin del fruto tiene lugar a travs de heridas o microheridas producidas en la corteza antes, durante o despus de la recoleccin. Otra podredumbre de herida que ocasionalmente puede ser importante es la cida, causada por
Geotrichum citri-aurantii E. E. Butler. Otras podredumbres de poscosecha son las
causadas por patgenos que infectan el fruto en precosecha pero que, por causas
diversas, permanecen latentes o inactivos, hasta despus de la recoleccin. Este
es el caso de la podredumbre negra (causada por Alternaria spp.), la gris (Botrytis
cinerea Pers.:Fr.), la marrn (Phytophthora citrophthora Leonian), las pedunculares
(Diplodia natalensis P. Evans y Phomopsis citri Fawcett), la antracnosis (Colletotrichum gloeosporioides Sacc.) u otras, cuya incidencia es menor y nicamente pueden resultar importantes en campaas, zonas o condiciones concretas.

Figura 1. Podredumbre verde causada por Penicillium digitatum en naranja (a) y


podredumbre azul causada por Penicillium italicum en mandarina (b).

Tratamientos fungicidas
El control de enfermedades de poscosecha se hace mayoritariamente mediante tratamientos en las centrales citrcolas con fungicidas qumicos de sntesis. Son tratamientos relativamente econmicos, fciles de aplicar, persistentes, tpicamente con accin curativa frente a infecciones fngicas establecidas,
y preventiva frente a posibles infecciones posteriores a la aplicacin. Adems,
muchos presentan tambin actividad antiesporulante.
/ 288 /

Control de enfermedades de poscosecha

Son muchos los fungicidas usados comercialmente en distintas zonas citrcolas del mundo, aunque el uso en poscosecha de algunos de ellos como el
benomilo o el difenilo ha sido cancelado. Por el contrario, nuevos productos
estn siendo evaluados y registrados. Entre los fungicidas ms utilizados en
poscosecha de ctricos se encuentran el imazalil (IMZ), el tiabendazol (TBZ),
el ortofenilfenato sdico (SOPP), todos ellos con una eficacia media o alta
contra Penicillium spp., la guazatina, eficaz contra G. citri-aurantii, y el fosetil-Al, eficaz contra P. citrophthora. Entre los productos registrados recientemente en algunas reas productoras para el uso en poscosecha de ctricos
destacan el pirimetanil, el miclobutanil, el metil-tiofanato, el fludioxonil, el
azoxistrobin y el trifloxistrobin2.
Estos agroqumicos pueden ser aplicados de varias formas en distintas fases
del manejo poscosecha de los frutos: en solucin acuosa en drncher o en la
lnea de confeccin (balsa o espray), en el lavado con detergente o mezclados
con ceras en la lnea de confeccin (figura 2), o tambin en forma gaseosa
como fumgenos en las cmaras frigorficas o de desverdizacin. En general,
son ms efectivos en agua que en ceras, por lo que para lograr los mismos
resultados su concentracin debe ser ms alta en las ceras3. Para el control de
patgenos de herida, como Penicillium spp., es importante una aplicacin
rpida del fungicida (mximo 24 horas despus de la cosecha) de forma que
pueda actuar antes del establecimiento del patgeno4. Para obtener un mayor
espectro de accin en algunos casos se recomienda la combinacin de varias
materias activas, tanto en solucin acuosa como en cera. Existen ya formulaciones comerciales de mezclas disponibles.
Existen protocolos distintos para el tratamiento fungicida en cada zona
productora de ctricos en funcin de los principales patgenos causantes de
dao y de condiciones particulares tanto en precosecha como en poscosecha. As, por ejemplo, en Florida se ha alcanzado un control satisfactorio
con la aplicacin de TBZ o IMZ con posterioridad a la de SOPP1. En California, la aplicacin de una mezcla de TBZ, carbonato de sodio y cloro a
alta temperatura, en drncher antes de la desverdizacin de los frutos control satisfactoriamente el podrido despus de la desverdizacin5. En Espaa
y Australia6 es comn el tratamiento conjunto con guazatina y con IMZ
para el control simultneo de las podredumbres cida, verde y azul. La guazatina, no obstante, no podr utilizarse en Europa a partir del ao 2012. En
Australia, adems, estos fungicidas se aplican en la lnea de manipulacin,
seguidos de un encerado que contiene 2,4-D (500 ppm), un tratamiento
tampoco permitido en Europa.
/ 289 /

Catarina P. Pssaro Carvalho, Carla Nunes, Llus Palou

Figura 2. Aplicacin de fungicida mezclado con cera


en una lnea de confeccin de ctricos.

Respecto a los tratamientos desinfectantes, Martnez-Jvega y Cuquerella7


recomiendan en Espaa utilizar un 0,3% de SOPP en maquinaria, un 0,1%
de amonio cuaternario en pisos y paredes, y un 0,5% de sosa en envases. Para
la desinfeccin de cmaras o de la totalidad de la central hortofrutcola puede
utilizarse formaldehdo (35%) a dosis de 10 cc/m3. En Colombia, no se han
realizado evaluaciones a este respecto. Algunas empresas usan cera con IMZ
al 0,2% (p/p).
La aplicacin masiva y continuada durante aos de materias activas como
TBZ, IMZ, SOPP o distintas mezclas ha generado preocupacin en la opinin pblica por la generacin de un exceso de residuos qumicos y tambin
problemas a la industria como el tratamiento de caldos residuales o la proliferacin de cepas patognicas resistentes, especialmente del gnero Penicillium,
que reduce o anula la eficacia de los tratamientos8, 9.
Se observa, adems, un marcado cambio de tendencia en la comercializacin de ctricos y de productos hortofrutcolas en general con dos consecuen/ 290 /

Control de enfermedades de poscosecha

cias importantes: por un lado, aumenta considerablemente el volumen de los


mercados de producto ecolgico, orgnico o verde, en los que se exige no
solo la ausencia total de residuos qumicos en el producto final sino tambin
la prohibicin de su uso durante todo el ciclo de produccin; por otro lado, y
lo que es muy grave para el sector productor, importantes mercados tradicionales, especialmente supermercados o cadenas alimentarias, estn exigiendo
el cumplimiento de criterios propios ms restrictivos que los lmites mximos
de residuos (LMR) establecidos por la legislacin. Se trata de limitaciones no
reguladas que suponen una privatizacin de las polticas de seguridad alimentaria, que causa gran confusin e inconveniente a los productores.
Otro cuestionamiento importante que enfrentan actualmente los fungicidas convencionales o de sntesis es la duracin y el coste del proceso de
desarrollo y, en su caso, registro de nuevas materias activas. Todo ello ha conducido a la bsqueda de alternativas a los agroqumicos para el control de las
enfermedades de poscosecha.

Tratamientos alternativos. CNCEP


En los ltimos aos, se han dedicado importantes esfuerzos a la evaluacin
de tratamientos antifngicos de poscosecha no contaminantes alternativos a
los fungicidas qumicos. Segn su naturaleza, estos tratamientos pueden ser
fsicos, qumicos o biolgicos10. Siendo no contaminantes, son tambin poco
txicos por lo cual su efectividad y persistencia son en general variables y limitadas, cosa que dificulta su implementacin comercial.
Debido a estas limitaciones, se ha estudiado tambin la combinacin de
distintos tratamientos alternativos, pero en general tampoco se igualan los
resultados obtenidos con los fungicidas qumicos convencionales. Por tanto,
para un control adecuado de las enfermedades, la aplicacin de tratamientos antifngicos alternativos debe encuadrarse en una estrategia ms amplia
de control que puede denominarse Control integrado no contaminante de
enfermedades de poscosecha (CINCEP), que se basa en un conocimiento
profundo de la epidemiologa de los patgenos y de los factores que determinan su incidencia en precosecha, cosecha y poscosecha para incidir de forma
global sobre el problema actuando sobre cada uno de estos factores en el momento adecuado para minimizar las prdidas econmicas2.
Este concepto implica prestar toda la atencin, adems de los tratamientos
de poscosecha, a los factores de precosecha (cultivar, condiciones climatolgi/ 291 /

Catarina P. Pssaro Carvalho, Carla Nunes, Llus Palou

cas y de parcela, manejo en campo, ...), cosecha (momento y modo) y poscosecha (higienizacin de centrales, diseo de instalaciones, manejo en las lneas
de confeccin, condiciones de conservacin y comercializacin, mercado de
destino, ...) determinantes en cada caso particular de la cantidad, calidad y
diseminacin del inculo fngico, de las vas de infeccin, de la resistencia de
los frutos a la infeccin y de las condiciones de desarrollo de la podredumbre.
En general, es importante cosechar con el ndice de madurez adecuado, siempre con tiempo seco y de forma extremadamente cuidadosa para minimizar
heridas en la piel y otros daos fsicos. Para ello y tambin para un manejo
adecuado en poscosecha se necesita contar con un equipo humano concienciado y bien entrenado.
Otras actuaciones en el marco del CINCEP requieren dedicar esfuerzos a
mltiples frentes de investigacin. Por ejemplo, una ventaja indiscutible para
la aplicacin del CINCEP sera la posibilidad de discriminar en las centrales
citrcolas las partidas de fruta que llegan en funcin de su probabilidad de pudrirse, de forma que el manejo en poscosecha y/o el destino de la produccin
puedan decidirse y planificarse en cada caso de la forma ms conveniente. En
este sentido sera de inters el desarrollo de modelos predictivos que establecieran la influencia de factores climticos, de parcela o de manejo en las poblaciones ambientales y epifitas de patgenos importantes presentes en campos
de ctricos. Tambin sera muy interesante el desarrollo de sistemas automticos y rpidos para la deteccin precoz y eliminacin de frutos infectados por
hongos en las lneas de confeccin de ctricos. No obstante, la principal lnea
de investigacin se centra en la bsqueda y evaluacin de nuevos mtodos no
contaminantes para el tratamiento antifngico de poscosecha.
Mtodos fsicos
Los tratamientos fsicos son deseables porque no generan ningn tipo de
residuo en los productos tratados ni en el ambiente. La conservacin a temperaturas bajas (3-5C para naranjas y mandarinas y 10-14C para limas,
limones y pomelos, siempre con un 90-98% HR) es un sistema fsico complementario a otros tratamientos antifngicos. El almacenamiento en estas
condiciones no ejerce por s mismo una actividad fungicida pero s una accin
fungisttica de inhibicin o retraso del crecimiento de los patgenos. Por otro
lado, ralentiza la actividad metablica del fruto y retrasa su entrada en senescencia, ayudando as a mantener la resistencia natural del fruto a la infeccin.
Otros tratamientos fsicos complementarios que se han ensayado, pero que
raramente se han implementado comercialmente, son la conservacin frigo/ 292 /

Control de enfermedades de poscosecha

rfica en atmsferas controladas convencionales (5-10% O2 + 0-10% CO2),


hipobricas (75 a 175 mm Hg) o de monxido de carbono (5-10% CO)11.
Los principales tratamientos fsicos antifngicos se basan en la aplicacin
de calor, ya sea mediante aire o agua calientes12. Los tratamientos ms convencionales de curado en ctricos consisten en la exposicin de los frutos a
temperaturas superiores a 30C y HR superiores al 90% durante 1-3 das.
Nunes et al.13 verificaron que el curado a 40C durante 18 horas permiti
reduccin total de la podredumbre verde y azul en naranjas Valencia de diferentes orgenes y conservadas a 5C durante 5 das seguidas de 20C durante
7 das. En otro estudio observaron que este curado no afectaba negativamente
la calidad de las naranjas14.
El curado es un tratamiento muy efectivo contra Penicillium, pero a escala comercial resulta poco prctico, caro y puede tener efectos adversos en
la calidad. La inmersin en agua caliente es un mtodo mucho ms sencillo
y prctico que puede dar buenos resultados, especialmente en combinacin
con otros tratamientos de distinta naturaleza. Por ejemplo, el calentamiento
de soluciones acuosas de productos qumicos antifngicos aumenta significativamente su efectividad y permite disminuir sensiblemente las dosis de
aplicacin. Con agua sola normalmente se utilizan baos de 1-3 min a temperaturas de 45-50C, pero hay que tener en cuenta que el margen existente
entre las temperaturas efectivas y fitotxicas es muy estrecho (figura 3). En
general, temperaturas superiores a 53C resultan ser fitotxicas. Otro sistema
de aplicacin de calor son los equipos de cepillado con agua caliente (hot
water brushing, HWB) en los que la fruta pasa durante 10-30 s sobre cepillos
en rotacin y recibe una ducha de agua calentada a 55-65C15.

Figura 3. Fitotoxicidad en mandarina cv. Clemenules por exceso de calor. Daos


severos en la corteza producidos por una inmersin de 150 s en agua a 65C.

/ 293 /

Catarina P. Pssaro Carvalho, Carla Nunes, Llus Palou

Las irradiaciones son tratamientos fsicos consistentes en tratar los frutos


ctricos con radiacin de energa superior (longitud de onda inferior) a la de
la luz visible. La luz ultravioleta lejana (UV-C, longitud de onda de 100 a 280
nm) aplicada a dosis bajas (0,5 a 8,0 kJ/m2) puede reducir la incidencia de
podredumbres, aunque la efectividad es limitada y existe el riesgo de que se
produzcan fitotoxicidades en funcin de la dosis, el tipo de fruto y su estado
de madurez16. Es una tecnologa que puede integrarse en la lnea de confeccin. Mucho ms cara y compleja es la aplicacin de radiaciones ionizantes
(longitud de onda inferior a 100 nm) ya sea a partir de fuentes radioactivas
(rayos gamma) o fsicas (rayos X, rayos beta o electrones acelerados). En general, el uso de estas tecnologas no se ha generalizado como mtodo de control
de enfermedades porque en las dosis no fitotxicas (inferiores a 1 kGy) su
poder de penetracin en el fruto y su efectividad son limitadas y los beneficios
no compensan el coste de las instalaciones especiales que se requieren17. Por
contra, s resultan adecuadas para la desinfeccin superficial y la desinsectacin de ctricos y otros frutos sometidos a exigencias cuarentenarias, por lo
que la legislacin de EE. UU. ha autorizado su uso y existen plantas en funcionamiento en zonas como Hawai.
Los efectos tanto del calor como de las irradiaciones sobre las enfermedades de poscosecha pueden ser directos o indirectos. Los primeros se refieren
al efecto del tratamiento sobre el propio patgeno (esporas o micelio en crecimiento) y los segundos a la induccin en el fruto husped de mecanismos
de resistencia a la infeccin17. Los tratamientos pueden aumentar los niveles
de compuestos antifngicos preformados presentes en la piel de los ctricos,
como el citral, algunas flavanonas y polimetoxiflavonas, o protenas antifngicas como la quitinasa o la b-1,3-glucanasa. Estas substancias estn presentes
de forma natural en frutos inmaduros que se muestran resistentes a enfermedades, pero sus niveles disminuyen considerablemente despus de la cosecha y
durante el almacenamiento. Los tratamientos fsicos tambin pueden inducir
la biosntesis en el flavedo de fitoalexinas, compuestos antifngicos no constituyentes entre los que destacan la escoparona y la escopoletina18, 19. Por otro
lado, el calor puede catalizar la biosntesis en heridas de la piel de ligninas y
materiales anlogos que actan como una barrera fsica a la penetracin de
las hifas del hongo. Adems, el curado, pero especialmente el agua caliente,
puede llegar a fundir las ceras epicuticulares del flavedo y taponar as microheridas y vas de entrada de los patgenos12.
La conservacin frigorfica de frutos ctricos en atmsferas ozonizadas ha
suscitado un gran inters comercial en los ltimos aos. Tras exhaustivas in/ 294 /

Control de enfermedades de poscosecha

vestigaciones realizadas en California y Espaa20, 21 puede concluirse que la


aplicacin de ozono gaseoso, aunque retrasa el desarrollo de las podredumbres, no reduce su incidencia, por lo que en ningn caso puede considerarse
un sustituto de los fungicidas aplicados en drncher o en la lnea de confeccin. No obstante, la ozonizacin continua o intermitente del ambiente de
las cmaras a concentraciones bajas no resulta fitotxica e inhibe de forma
importante el crecimiento areo de micelio y la esporulacin de Penicillium
spp., en frutos conservados en fro (figura 4); as se puede reducir la carga de
inculo fngico presente en los almacenes y evitar la proliferacin de cepas
patognicas resistentes a los fungicidas. Sin embargo, este efecto es solamente
transitorio y los patgenos reanudan su crecimiento areo y esporulan cuando
el ozono deja de estar presente en el ambiente. Adems, el gas no puede traspasar ni plsticos ni cartones por lo que este efecto nicamente se consigue
cuando los frutos estn almacenados en envases de gran superficie abierta.
Debido a su elevado poder oxidante, el ozono puede resultar daino para el
ser humano, fitotxico para los frutos y corrosivo para muchos materiales. Por
ello es muy importante que, en el caso de que se instale un sistema de generacin de ozono en una central citrcola, se controle en todo momento la concentracin de gas generado y se adopten medidas de seguridad como alarmas
y sistemas de paro y ventilacin automatizados para garantizar la seguridad de
los operarios y del producto.

Figura 4. Esporulacin de Penicillium digitatum en naranjas conservadas a


5C durante 1 mes en una atmsfera de aire (derecha) o en una atmsfera
ozonizada con 0,3 ppm de ozono (izquierda).
/ 295 /

Catarina P. Pssaro Carvalho, Carla Nunes, Llus Palou

Recientemente se ha ensayado la aplicacin de choques gaseosos (24-48


horas) de CO2 y O2 a alta temperatura (33C) como sistema para reducir la
duracin de los tratamientos de curado, efectivos contra las podredumbres
verde y azul, pero poco prcticos a escala comercial22. Concentraciones de 15
kPa CO2 o 30 kPa O2 resultaron efectivas en naranjas y mandarinas inoculadas artificialmente con P. digitatum y P. italicum e incubadas a 20C durante
7 das, pero los tratamientos no fueron persistentes.
Otro tratamiento gaseoso ensayado recientemente es la fumigacin de ctricos con amonaco23. La aplicacin de 3.000 ppm de amonaco a 22C durante 6 horas control satisfactoriamente la podredumbre verde en naranjas y
limones. Adems, este sistema de control se mostr sinrgico con la aplicacin
de IMZ a dosis muy bajas.
Mtodos qumicos de baja toxicidad
Los productos qumicos alternativos a los fungicidas de sntesis convencionales deben ser sustancias, naturales o de sntesis, con efectos residuales sobre
el medioambiente y toxicolgicos sobre personas y animales, conocidos y muy
bajos. Por este motivo se evalan principalmente sustancias presentes de forma natural en plantas, animales o microorganismos o, en el caso de productos
sintetizados artificialmente, aditivos alimentarios permitidos sin restricciones
por la legislacin.

Entre las sustancias naturales, destacan por su elevada actividad antifngica los
extractos de plantas superiores y los aceites esenciales24, 25. As, los glucosinolatos,
producidos por especies de la familia de las crucferas, o los extractos de Aloe vera
o de especies de los gneros Allium y Capsicum han mostrado actividad contra podredumbres de poscosecha de ctricos. Aceites esenciales e gneros como Citrus,
Thymus, Origanum, Lavandula o Eucaliptus han sido evaluados por su capacidad fungitxica y se han identificado algunos compuestos terpnicos responsables
de esta capacidad. En algunos casos, estas sustancias han sido clasificadas como
Generally Recognized as Safe (GRAS) por la United States Federal Drug Administration (US FDA) de EE. UU. debido a que su utilizacin no genera residuos
indeseables. Carvalho et al. 26 han evaluado in vitro el efecto de 22 aceites esenciales de ctricos sobre el crecimiento de P. digitatum y P. italicum, y han observado
que todos los compuestos de aceite evaluados inhibieron P. digitatum al 50-100%
aplicados a una concentracin media de 30-50 g/mL. De los compuestos estudiados el carvacrol fue el que present mayor actividad fungisttica contra ambos
hongos, seguido del timol. Otros compuestos naturales que presentan actividad
antifngica son: compuestos aromticos voltiles como el acetaldehdo, el hexanal
/ 296 /

Control de enfermedades de poscosecha

o el benzaldehdo; reguladores naturales del crecimiento, como el cido jasmnico


o el metil jasmonato; el quitosano, un polmero de la b-1,4-glucosamina que se
obtiene por deacetilacin de la quitina del exoesqueleto de los artrpodos, y su
derivado el glicol-quitosano; pptidos antifngicos como los identificados en el
IATA (Instituto de Agroqumica y Tecnologa de Alimentos, Valencia, Espaa27),
o las protenas antimicrobianas biosintetizadas por el fruto en respuesta a situaciones de estrs (quitinasas y b-1,3-glucanasa).
Los aditivos alimentarios y algunas sustancias sintticas catalogadas como
GRAS suelen ser cidos y sales orgnicas o inorgnicas con una accin contra los microorganismos bastante especfica. Los que se han mostrado ms
efectivos contra las podredumbres verde y azul de los ctricos son el sorbato
potsico, el benzoato sdico, el carbonato sdico y el bicarbonato sdico10, 28.
Estas sustancias pueden utilizarse en baos de 1-3 min en soluciones acuosas
calientes (40-50C) a concentraciones del 2-3% (figura 5). Aunque su eficacia y persistencia no iguala a la de los fungicidas convencionales, presentan
inters comercial por su efectividad, fcil disponibilidad y aplicacin, bajo
precio y facilidad de combinacin con otros mtodos alternativos de control.

Figura 5. Tratamiento de ctricos por inmersin en una solucin


caliente de carbonato sdico en una central de California.
/ 297 /

Catarina P. Pssaro Carvalho, Carla Nunes, Llus Palou

Montesinos-Herrero y Palou29 han revisado recientemente las investigaciones referentes a la combinacin de estos compuestos con sistemas fsicos de
control como el calor o las irradiaciones o con otros sistemas qumicos como
los fungicidas convencionales a bajas dosis o los recubrimientos comestibles.
En este sentido, en el Centro de Tecnologa Poscosecha del IVIA (Valencia,
Espaa) se han desarrollado pelculas y recubrimientos comestibles antifngicos efectivos en el control de las principales enfermedades de poscosecha de
los frutos ctricos30, 31. Estos recubrimientos se prepararon mediante la adicin de aditivos alimentarios y sustancias GRAS con propiedades antifngicas
(sales de cidos orgnicos, sales de parabenos, entre otros) a formulaciones
de hidroxipropil metilcelulosa (HPMC) y lpidos hasta obtener emulsiones
estables. Tras pruebas de seleccin in vitro (figura 6) e in vivo en mandarinas
y naranjas se encontr que los recubrimientos que contenan sorbato potsico, benzoato sdico, propionato sdico y alguna mezcla de estos aditivos
eran los ms efectivos. En trabajos similares, se han obtenido recubrimientos
antifngicos para ctricos mediante la adicin de aceites esenciales a bases de
carnauba o almidn de maz32.

Figura 6. nhibicin in vitro de Penicillium digitatum por difusin de disco de


pelcula. Pelcula formulada sin (a) o con la adicin
de aditivo alimentario antifngico (b).

Otros compuestos que se han evaluado para el control de podredumbres


en poscosecha de ctricos incluyen el brax (tetraborato sdico decahidratado), el cido brico, el poliboro (octaborato disdico), el etanol, el dixido
de azufre, el polisulfuro de calcio, el cido peroxiactico y el perxido de hidrgeno25. Ninguno de estos tratamientos se est utilizando comercialmente
debido o a su falta de efectividad o a problemas derivados de su aplicacin.
En cambio, algunos de ellos (brax, cido peroxiactico, compuestos de amo/ 298 /

Control de enfermedades de poscosecha

nio cuaternarios, entre otros) s pueden utilizarse, adems del hipoclorito de


sodio y sus derivados, como desinfectantes en el lavado de los frutos y de las
instalaciones de la central citrcola1.
Mtodos biolgicos (microorganismos antagnicos)
La poscosecha presenta un desafo nico para el control biolgico, mediante el uso de microorganismos antagonistas, en el combate de enfermedades. El
ambiente parcialmente controlado, de temperatura y humedad, puede ayudar
a alterar el equilibrio en las interacciones entre el husped, el patgeno y el
antagonista a favor de este ltimo. La restrictiva aplicacin directa sobre los
frutos cosechados y el elevado valor de los productos tratados podr justificar
un producto biolgico relativamente ms caro. En relacin con los productos
qumicos, los agentes de control biolgico presentan ventajas claras pues son
ms seguros, ya que no se acumulan en los alimentos; ms persistentes a lo
largo del tiempo, pues no alteran de forma sustancial los principales aspectos
del patgeno; producen un efecto insignificante en el equilibrio ecolgico,
ya que no destruyen a los enemigos naturales, y son compatibles con otros
sistemas de lucha.

Durante los ltimos 25-30 aos diversos programas se han desarrollado


en todo el mundo y numerosos agentes de biocontrol han sido investigados
frente a diversas enfermedades de poscosecha de frutos33. Aunque en el plano experimental se han encontrado y patentado en laboratorios de todo el
mundo numerosas levaduras, bacterias y tambin hongos filamentosos con
capacidad antagnica contra podredumbres de poscosecha de los ctricos,
los registros son complicados y el uso comercial es escaso. Normalmente
los mejores resultados se obtienen en usos preventivos, ya que en general la
actividad fungicida o curativa es limitada. Tienen un gran potencial como
tratamientos complementarios a otros sistemas alternativos respetuosos con
el medioambiente10.
Actualmente existen en el mercado muy pocos biofungicidas para control
de enfermedades de poscosecha, incluidas las de frutos ctricos: AspireTM a
base Candida oleophila, producido por Ecogen y limitado a EE. UU. e Israel; BioSaveTM formado por Pseudomanas syringae, producido inicialmente
por EcoScience y actualmente por Jet Harvest Solutions y limitado a EE.
UU.; ShemerTM a base de Metschnikowia fructicola, producido por Bayer
Crop Science; Pantovital a base de Pantoea agglomerans, producido Biodurcal
S.L., Espaa; Serenade (Bacillus subtilis, AgraQuest, EE. UU.); Boniprotect
(Aureobasidium pullulans, Bio-protect, Alemania); Yieldplus (Cryptococcus al/ 299 /

Catarina P. Pssaro Carvalho, Carla Nunes, Llus Palou

bidus, Surfrica) y Candifruit (Candida sake, Espaa). Nuevos productos en


proceso de registro son Citrigreen a base de Bacillus subtilis y B. licheniformis, formulado en Surfrica34. Manso y Nunes35 solicitaron la patente de la
cepa NCYC3728 (PBC-2) de la levadura Metschnikowia andauensis (Patente
N105220) como agente de biocontrol contra enfermedades de poscosecha,
incluyendo algunas de los frutos ctricos.
Esta falta de antagonistas comercializados se debe a que son pocos los
pases que, como EE. UU., disponen de normativas especficas y simplificadas para el registro de este tipo de productos biolgicos. En otros pases,
como los de la Unin Europea, el registro se ve obstaculizado por la exigencia de estudios toxicolgicos largos y costosos equiparables a los exigidos para cualquier pesticida de sntesis. No obstante, es probable que ms
productos entren al mercado en los prximos aos como resultado de los
programas de investigacin en control biolgico que se vienen realizando
en todo el mundo.
El desarrollo de sistemas de control biolgico requiere de varios pasos para
aislar, evaluar y seleccionar un agente de biocontrol potencial. Es necesaria
la realizacin de bioensayos a escala piloto y comercial. El mecanismo de antagonismo del microorganismo tiene que ser entendido. Para la aplicacin
comercial, el producto tiene que ser formulado y producido a escala industrial
de forma econmica manteniendo su actividad biolgica36.
Normalmente, los antagonistas se aplican sobre los frutos ctricos en bao
o drncher como suspensiones acuosas de distintas concentraciones, pero
existen excepciones como los biofumigantes que pueden utilizarse como tratamientos gaseosos en cmaras de conservacin o en combinacin con los
tratamientos de desverdizacin37.
El trmino control biolgico de enfermedades de poscosecha fue adoptado de la definicin de control biolgico empleada por los entomlogos,
que se defina como el control de un organismo por otro. Sin embargo, la
enfermedad de una planta no es una plaga, o sea no es un organismo sino un
proceso, que puede ser influenciado a nivel del patgeno, del husped o del
microambiente38. Esta definicin gener lo que se llama agentes de control
biolgico de segunda generacin y permiti la exploracin de nuevos caminos, en el sentido de desarrollar sistemas de biocontrol capaces de superar las
limitaciones existentes en los de primera generacin, promoviendo una mayor
y constante eficacia y posibilitando el control de infecciones ya previamente
establecidas o latentes36.
/ 300 /

Control de enfermedades de poscosecha

Con esta definicin de control biolgico ampliada, el manejo de la enfermedad podr incluir el uso de un proceso biolgico o de un producto de un proceso
biolgico. De este modo numerosos nuevos enfoques estn disponibles para un
exitoso desarrollo de productos y procesos de control biolgico: mezclas de dos o
ms antagonistas, manipulacin ambiental de los nutrientes para obtener cepas de
antagonistas resistentes a ciertas condiciones adversas, aplicaciones en precosecha,
manipulacin gentica de antagonistas, mejora de los procesos de produccin y
formulacin, e integracin del control biolgico con otros mtodos alternativos
de control. Investigando en estos aspectos se espera solucionar los problemas de
la primera generacin comercial de agentes de biocontrol, tales como la excesiva
especificidad (rango estrecho de actividad para frutos, enfermedades y/o condiciones ambientales particulares), la falta de una eficacia alta y constante, y la incapacidad de controlar infecciones latentes y previamente establecidas36, 39.
Algunos ejemplos de estos enfoques aplicados en frutos ctricos son el aumento significativo de la eficacia del agente de biocontrol B. subtilis cuando se
combin con bicarbonato sdico o agua caliente34. Torres et al.40 verificaron
que con soluciones de bicarbonato sdico a 50C seguidas de la aplicacin del
agente de biocontrol P. agglomerans, se obtena un control de la enfermedad
igual o superior a aquella alcanzada con el fungicida IMZ. En la integracin
con otros mtodos, se observaron efectos positivos en el control de la podredumbre verde en limones mediante la combinacin de P. agglomerans con un
tratamiento posterior de curado a 33C durante 6 horas41.

Conclusiones y recomendaciones
Las enfermedades de poscosecha son una de las principales causas de prdidas econmicas en el cultivo de frutos ctricos. Estas prdidas pueden ser
muy variables puesto que dependen de factores como la especie y el cultivar, la
climatologa y el manejo del cultivo tanto en precosecha como en poscosecha.
Gestionando adecuadamente los principales procesos metablicos de los frutos, segn la particular susceptibilidad de cada especie y variedad a dichos factores,
as como otros que intervienen (estados de madurez y sanitario), es posible limitar
las enfermedades de poscosecha y las alteraciones fisiolgicas ms comunes.
Los fungicidas qumicos convencionales tienen su futuro comprometido,
por lo que es necesaria la investigacin en la bsqueda de alternativas para el
control de enfermedades de poscosecha. En un contexto de control integrado
no contaminante, debe primarse la combinacin de diferentes mtodos alter/ 301 /

Catarina P. Pssaro Carvalho, Carla Nunes, Llus Palou

nativos fsicos, biolgicos y qumicos de baja toxicidad. Colombia tiene todo


un campo por explotar en esta rea y debe buscar un valor aadido a su gran
agrobiodiversidad. Adems, es fundamental el conocimiento de los patgenos y de los factores que determinan su incidencia en precosecha, cosecha y
poscosecha. Son necesarios esfuerzos e inversiones para la formacin de programas de investigacin articulados en redes de conocimiento que permitan
ofertar al sector soluciones tecnolgicas integrales.
Referencias bibliogrficas
1. LADANIYA, M. Citrus Fruit: Biology Technology and Evaluation. USA: Elsevier, 2008. p. 336.
2. PALOU, L. Control integrado no contaminante de enfermedades de poscosecha
(CINCEP): nuevo paradigma para el sector espaol de los ctricos. En: Levante
Agrcola. 2011. Vol. 406, p. 173-183.
3. BROWN, G. E. Control of Florida citrus decay with Guazatine. En: Proc. Fla.
Sta. Hort. Soc. 1983. Vol. 96, p. 335337.
4. GUTTER, Y. Investigation on new postharvest fungicide in Israel. En: Proc. Int.
Soc. Citric, Japan, 1981. Vol. 2, p. 810811.
5. SMILANICK, J. L.; MANSOUR, M. F. y SORENSON, D. Pre- and postharvest treatments to control green mold of citrus fruit during ethylene degreening.
En: Plant Dis. 2006. Vol. 90, p. 89-96.
6. TUGWELL, B. L. and CHVYL, W. L. Modified atmosphere packaging for citrus. Int. In: Citrus Congress, Sun City, South Africa. 1997. p. 11501152.
7. MARTNEZ-JVEGA, J. M. y CUQUERELLA, J. Manejo poscosecha de
frutos ctricos de produccin integrada. 2 Congreso Iberoamericano de tecnologa Postcosecha y Agroexportaciones. 2 Simposio Tecnologas para Tratamientos Cuarentenarios en Frutas Tropicales y Subtropicales para la Exportacin
(CYTED-Proyecto XI.10), Bogot, Colombia. 2000. p. 15-19.
8. HOLMES, G. J., ECKERT, J. W. Sensitivity of Penicillium digitatum and P. italicum to post harvest citrus fungicide in California. En: Phytopathology. 1999.
Vol. 89, p. 716721.
9. PALOU, L.; et al. Micoflora en centrales citrcolas de Tarragona. En: Investigacin Agraria: Produccin y Proteccin Vegetales. 2001. 16, 447-462.
10. PALOU, L.; SMILANICK, J. L. and DROBY, S. Alternatives to conventional fungicides for the control of citrus postharvest green and blue molds. En:
Stewart Postharvest Review. 2008. Vol. 2, No. 2, p. 1-16.
/ 302 /

Control de enfermedades de poscosecha

11. PALOU, L. Mtodos de control fsicos ensayados en postcosecha contra las podredumbres verde y azul de los ctricos. Levante Agrcola. 2005. Vol. 377, p.
341-350.
12. PALOU, L. y PLAZA, P. Tratamientos con calor para el control de enfermedades
de postcosecha de ctricos. En: Todo Citrus. 2005. Vol. 31, p. 21-36.
13. NUNES, C.; et al. Effect of high temperature treatments on growth of Penicillium spp. and their development on Valencia oranges. En: Food Science and
Technology International. 2007. Vol. 13, p. 63-68
14. NUNES, C.; et al. Effects of postharvest curing treatment on quality of citrus
fruit. En: Vegetable Crops Research Bulletin. 2007. Vol. 66, 213-220
15. PORAT, R.; et al. Reduction of postharvest decay in organic citrus fruit by a
short hot water brushing treatment. Postharvest Biol. Technol. 2000. Vol. 18,
p. 151-157.
16. DROBY, S.; et al. Factors affecting UV-induced resistance in grapefruit against
the green mould decay caused by Penicillium digitatum. En: Plant Pathol. 1993.
Vol. 42, p. 418-424.
17. PALOU, L. Control of citrus postharvest diseases by physical means. En: Tree
and Forestry Science and Biotechnology. 2009. Vol. 3, (Special Issue 2), p. 127142.
18. BEN-YEHOSHUA, S.; et al. Preformed and induced antifungal materials
of citrus fruits in relation to the enhancement of decay resistance by heat
and ultraviolet treatments. En: J. Agric. Food Chem. 1992. Vol. 40, No.
1217-1221.
19. CAYUELA, J. A.; et al. Induccin de fitoalexinas en tratamientos de curado para
el control de Penicillium spp. En: Levante Agrcola, Revista Internacional de
Ctricos. 2010. Vol. 401, p. 216-222.
20. PALOU, L.; SMILANICK, J. L. y CRISOSTO, C. H. Conservacin frigorfica
de ctricos en atmsferas ozonizadas: efecto sobre las enfermedades de postcosecha. En: Levante Agrcola. 2004. Vol. 372, p. 321-328.
21. PALOU, L.; SMILANICK, J. L. y MARGOSAN, D. A. Ozone applications for
sanitation and control of postharvest diseases of fresh fruits and vegetables. In:
Gonzlez-Len, A. (Ed.), Recent Advances in Alternative Postharvest Technologies to Control Fungal Diseases in Fruits and Vegetables. Trivandrum, Kerala,
India: Transworld Research Network, 2007. p. 39-70.
22. PALOU, L.; et al. Novel approaches for postharvest preservation of fresh citrus
fruits. In: Slaker, D.A. (Ed.), Citrus Fruits: Properties, Consumption and Nutrition. New York: Nova Science Publishers, Inc., 2011. p. 1-45.
/ 303 /

Catarina P. Pssaro Carvalho, Carla Nunes, Llus Palou

23. MONTESINOS-HERRERO, C.; et al. Control of citrus postharvest decay by


ammonia gas fumigation and its influence on the efficacy of the fungicide imazalil. En: Postharvest Biol. Technol. 2011. 59, p. 85-93.
24. ZACCHINO, S. A.; et al. The Need for New Antifungal Drugs: Screening for
Antifungal Compounds with a Selective Mode of Action with Emphasis on the
Inhibitors of the Fungal Cell Wall, in Plant-derived Antimycotics (Eds. M. Rai
and D. Mares). Binghampton: The Haworth Press, 2003. p. 147.
25. PALOU, L. Evaluacin de alternativas para el tratamiento antifngico en poscosecha de ctricos de produccin integrada. En: Horticultura. 2007. Vol. 200,
p. 82-93.
26. CARVALHO, C. P.; et al. Evaluacin in vitro de 22 compuestos de aceites
esenciales de ctricos sobre el crecimiento de Penicillium digitatum y Penicillium
italicum: Efecto dosis y comparativo. En: Memorias XI Congreso Colombiano
de Fitoqumica. Medelln, Colombia. 2011. (In press).
27. MUOZ, A.; LPEZ-GARCA, B. y MARCOS, J. F. Comparative study of
antimicrobial peptides to control citrus postharvest decay caused by Penicillium
digitatum. En: J. Agric. Food Chem. 2007. Vol. 55, p. 8170-8176.
28. MONTESINOS-HERRERO, C. et al. Evaluation of brief potassium sorbate
dips to control postharvest penicillium decay on major citrus species and cultivars. En: Postharvest Biol. Technol. 2009. Vol. 52, p. 117-125.
29. MONTESINOS-HERRERO, C. y PALOU, L. Combination of physical
and low-toxicity chemical postharvest treatments for integrated disease management of citrus fruit: a review. En: Stewart Postharvest Review. 2010.
Vol. 1, p. 1-11.
30. VALENCIA-CHAMORRO, S. A.; et al. Inhibicin de las podredumbres verde
y azul de las naranjas mediante pelculas y recubrimientos comestibles antifngicos a base de hidroxipropil metilcelulosa-lpidos. En: Levante Agrcola. 2009.
Vol. 396, p. 206-212.
31. VALENCIA-CHAMORRO, S. A.; et al. Antimicrobial edible films and coatings for fresh and minimally processed fruits and vegetables: a review. En: Critical Reviews in Food Science and Nutrition. 2011. Vol. 51, p. 872-900.
32. DU PLOOY, W.; REGNIER, T. y COMBRINCK, S. Essential oil amended
coatings as alternatives to synthetic fungicides in citrus postharvest management. En: Postharvest Biol. Technol. 2009. Vol. 53, p. 117-122.
33. NUNES, C. New developments in safety methods to control postharvest fruit
decays. In: Environmentally Friendly and Safe Technologies for Quality of Fruits
and Vegetables (Nunes C, ed.). Faro: Universidade do Algarve, 2010. p. 133-145
/ 304 /

Control de enfermedades de poscosecha

34. OBAGWU, J. y KORSTEN, L. Integrated control of citrus green and blue


molds using Bacillus subtilis in combination with sodium bicarbonate or hot
water. En: Postharvest Biology and Technology. 2003. Vol. 28, p. 187-194
35. MANSO, T. y NUNES, C. Metschnikowia andauensis as a new biocontrol agent
of fruit postharvest diseases. En: Postharvest Biol. Technol. 2011. doi:10.1016/j.
postharvbio.2011.02.004.
36. NUNES, C.; MANSO, T. y LIMA-COSTA, M. E. Postharvest biological control of citrus fruit. Tree and Forestry Science and Biotecnology. 2009. Vol. 3
(Special Issue 2), p.116-126.
37. MERCIER, J. y SMILANICK, J. L. Control green mold and sour rot of stored
lemon by biofumigation with Muscudor albus. Biological Control. 2005. Vol.
32, p. 401-407.
38. WISNIEWSKI, M.; et al. Postharvest Biocontrol: new concepts and applications. Biological Control: a Global Perspective. C. Vincent, M. S. Goettel and
G. Lazarovits. Oxfordshire, 2007. CABI: 262-273.
39. DROBY, S.; et al. Twenty years of postharvest biocontrol research: Is it time for
a new paradigm?. En: Postharvest Biology and Technology. 2009. Vol. 52, No.
2. p. 137-145.
40. TORRES, R.; et al. Application of Pantoea agglomerans CPA-2 in combination
with heated sodium bicarbonate solutions to control the major postharvest diseases affecting citrus fruit at several Mediterranean locations. En: European
Journal of Plant Pathology. 2007. Vol. 118, p. 73-83
41. PLAZA, P.; et al. Combining Pantoea agglomerans (CPA-2) and curing treatments
to control established infections of Penicillium digitatum on lemons. En: Journal
of Food Protection. 2004. Vol. 67, p. 781-786

/ 305 /

/ 306 /

Captulo 11 / Chapter 11

ndustrializacin de ctricos
y valor agregado
Catarina Pedro Pssaro Carvalho*
Julin Londoo-Londoo**

Resumen
En este captulo se describen las principales etapas
del proceso de produccin de zumos de ctricos, as
como las caractersticas de calidad exigidas para su
comercializacin de acuerdo con la normativa internacional. Adicionalmente se hace referencia a otras
alternativas de aprovechamiento industrial de los
frutos ctricos y finalmente, se presenta informacin
relacionada con las caractersticas nutricionales y de
valor agregado de los productos citrcolas, haciendo
nfasis en el efecto que sobre ellas tienen los procesos
de industrializacin.
*

ng. Agrnoma. Ph.D. en


ng. de Alimentos. C.. La
Selva, Corporacin Colombiana de nvestigacin Agropecuaria (COROPOCA), km
7 va Las Palmas, Vereda
Llanogrande, Rionegro, Antioquia, Colombia.
** Farmacutico. Doctor en
Ciencias Qumicas. Corporacin Universitaria Lasallista. Grupo de nvestigacin
en ngeniera de Alimentos
- GRAL. Caldas, Antioquia
Colombia.
Correspondencia:
Catarina Pedro Pssaro
Carvalho:
[email protected]

Palabras clave: ctricos, produccin, industrializacin,


calidad, normas internacionales.
Citrus industrialization and added value
Abstract
This chapter describes the main stages of the production of citrus juices, and the quality characteristics
demanded to commercialize those juices according
to international regulations. Additionally, alternatives for the industrial use of citrus fruits are mentioned and, finally, information related to the nutritio/ 307 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Julin Londoo-Londoo

nal properties and added value characteristics of citrus products is


provided, emphasizing the effect of industrialization processes on
citrus.
Key words: Citrus, production, industrialization, quality, international
regulations.

ntroduccin
El sector de la transformacin de los frutos ctricos est en plena expansin,
tanto por el aumento de la demanda de estos productos como por el nivel tecnolgico alcanzado por las industrias. Este sector es una buena alternativa para aquellas
cosechas que no pueden comercializarse por determinadas circunstancias; esto no
quiere decir que las naranjas de peor calidad sean destinadas a la industria, sino
aquellas que, por ejemplo, no tengan los calibres comerciales exigidos.
Del total de la produccin de ctricos, cerca de un 60% se consume en el
mercado de productos frescos, y aproximadamente un 40% es procesado.
El sector citrcola tiene dos formas principales de comercializacin de sus
productos. Por un lado existe un mercado que est basado en la comercializacin de los productos frescos; y por otro lado, existe un mercado para aquellos
bienes que son producto de la transformacin industrial de la fruta.
La industrializacin de los ctricos est dominada por los productos de zumos, los cuales ocupan una significante proporcin del mercado de bebidas,
industria que ha evolucionado a travs de los aos, del zumo fresco al popular
zumo NFC (siglas del ingls Not From Concentrate o hechos a partir de
zumo no concentrado o no concetrado), el cual supera hoy todas las dems
categoras de zumos ctricos. El zumo NFC se vende en el segmento del mercado de zumo fro con precio ms alto que su valor nominal, y su tasa de crecimiento, ao tras ao, ha sido elevada durante la ltima dcada. En los Estados
Unidos las ventas por temporada de zumo de naranja NFC han aumentado un
10,5% desde la ltima temporada. El total de la produccin mundial de zumo
de ctricos 2004/2005 se aproxim a 2,7 millones de toneladas. Los principales
productores de zumo de naranja son Brasil y la Florida, y su produccin conjunta representa un poco menos del 90% de la demanda mundial, seguidos de
China1. De los frutos ctricos que son transformados, el 81,9% corresponde a
naranjas, , el 7,9% a limones, el 6,8% a mandarinas, y el 3,2% a pomelos1.
/ 308 /

ndustrializacin de ctricos y valor agregado

El sector de la industrializacin de ctricos ha permanecido fuerte y estable


durante muchos aos; sin embargo, si se quiere ser competitivo en un mercado global y cambiante, donde los consumidores hoy da prefieren productos
nuevos, frescos, saludables y respetuosos con el medioambiente, se necesita
innovar y agregar valor a sus productos tradicionales.

Zumos
La popularidad del zumo de naranja se debe a su sabor placentero y refrescante, adems de que los consumidores tienen conocimiento del beneficio nutritivo
de la vitamina C, del cido flico y de la fibra diettica que contiene cada porcin.
La extraccin del zumo es una tecnologa con base en la cual se extrae ms
del 75 por ciento de la produccin mundial de zumos ctricos. Este principio se basa en el diseo nico de extractores de zumo dentro de la mquina.
Los componentes interactan de tal manera que pelan la naranja y exprimen
el zumo de la naranja pelada mediante un colador; todo, en un espacio de
fracciones de segundo. El resultado es un zumo de una excelente calidad que
est listo para ser empacado como zumo fresco o que puede seguir el ciclo del
zumo NFC o de zumo de naranja concentrado y congelado (JNCC)2
Clasificacin de Zumos

Segn el CODEX STAN 247-20053, por zumo (jugo) de fruta se entiende


el lquido sin fermentar, pero fermentable, que se obtiene de la parte comestible de frutas en buen estado, debidamente maduras y frescas o frutas que se
han mantenido en buen estado por procedimientos adecuados, inclusive por
tratamientos de superficie, aplicados despus de la cosecha, de conformidad
con las disposiciones pertinentes de la Comisin del Codex Alimentarius.
Algunos zumos podrn elaborarse junto con sus pepitas, semillas y pieles,
que normalmente no se incorporan al zumo, aunque sern aceptables algunas
partes o componentes de pepitas, semillas y pieles que no puedan eliminarse
mediante las Buenas Prcticas de Manufactura (BPM).
Los zumos se preparan mediante procedimientos adecuados que mantienen
las caractersticas fsicas, qumicas, organolpticas y nutricionales esenciales de
los zumos de la fruta de que proceden. Podrn ser turbios o claros, y podrn
contener componentes restablecidos de sustancias aromticas y aromatizantes
voltiles, elementos todos ellos que debern obtenerse por procedimientos fsicos adecuados y que debern proceder del mismo tipo de fruta (se permite la
introduccin de aromas y aromatizantes para restablecer el nivel de estos com/ 309 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Julin Londoo-Londoo

ponentes hasta alcanzar la concentracin normal que se obtiene en el mismo


tipo de fruta). Podrn aadirse pulpa y clulas (en el caso de los ctricos, la pulpa
y las clulas son la envoltura del zumo elaborado del endocarpio) obtenidas por
procedimientos fsicos adecuados del mismo tipo de fruta.
Un zumo de un solo tipo es el que se adquiere de un solo tipo de fruta, y
un zumo mixto es el que se obtiene mezclando dos o ms zumos, o zumos y
purs de diferentes tipos de frutas.
Los zumos de fruta se clasifican en:
t Zumo de fruta exprimido directamente por procedimientos de extraccin
mecnica.
t Zumo de fruta a partir de concentrados, mediante reconstitucin del zumo
concentrado de fruta. Se obtiene por dilucin adecuada de un zumo previamente concentrado.
t Zumo concentrado de fruta: se entiende el producto que se ajusta a la
definicin anterior, salvo que se ha eliminado fsicamente el agua en una
cantidad suficiente para elevar el nivel de grados Brix, al menos, en un
50% ms que el valor Brix establecido para el zumo reconstituido de la
misma fruta (11,2 para el caso de los ctricos). En la produccin de zumo
destinado a la elaboracin de concentrados se utilizarn procedimientos
adecuados, que podrn combinarse con la difusin simultnea con agua
de pulpa y clulas y/o el orujo de fruta, siempre que los slidos solubles de
fruta extrados con agua se aadan al zumo primario en la lnea de produccin antes de proceder a la concentracin.
t Zumo de fruta extrado con agua: es aquel que se obtiene por difusin con
agua de
t fruta pulposa entera cuyo zumo no puede extraerse por procedimientos fsicos, o
t fruta deshidratada entera.
t El contenido de slidos del producto acabado deber satisfacer el valor
mnimo de grados Brix para el zumo.
t Pur de fruta utilizado en la elaboracin de zumos y nctares de frutas: se
entiende el producto sin fermentar, pero fermentable, obtenido mediante
procedimientos idneos, por ejemplo, al tamizar, triturar o desmenuzar la
parte comestible de la fruta entera o pelada sin eliminar el zumo.
/ 310 /

ndustrializacin de ctricos y valor agregado

t Pur concentrado de fruta utilizado en la elaboracin de zumos y nctares


de frutas: se obtiene mediante la eliminacin fsica de agua del pur de
fruta en una cantidad suficiente para elevar el nivel de grados Brix en un
50% ms que el valor Brix establecido para el zumo.
t Nctar de fruta: es el producto sin fermentar, pero fermentable, que se obtiene aadiendo agua con o sin la adicin de azcares de miel y/o jarabes,
y/o edulcorantes. El contenido mnimo de zumo natural es de 50% (p/p).
La Generalitat Valenciana en Espaa, considera adems:
t Zumo de ctricos recin exprimido: aquel que es obtenido para consumir
inmediatamente sin mediar ningn tratamiento.
t Zumo natural refrigerado: aquel que es obtenido y dispuesto para consumir en un corto espacio de tiempo (15-18 das). Suele someterse a una pasteurizacin suave que lo estabiliza para envasarse sin oxgeno y conservarse
en ambiente refrigerado (0-5C).
t Bebidas refrescantes a base de zumo de ctricos: son las bebidas preparadas
a partir de agua, ingredientes y dems productos autorizados con un contenido mnimo exigido por la legislacin del 8% (p/v) de zumo de ctrico.
Tecnologias de extraccion de zumos
Los extractores industriales de ctricos comenzaron a desarrollarse en los
aos 40 y 50, y desde entonces no han dejado de incorporar nuevas mejoras
y avances tecnolgicos que han permitido aumentar los rendimientos y la
calidad del zumo obtenido.

Bsicamente son dos las tcnicas utilizadas en la industria para la extraccin


de zumos de ctricos: la FMC, desarrollada por la empresa norteamericana
Food Machinery Company, y la Zumex, desarrollada por la empresa espaola
Mquinas y Elementos S. A. A continuacin se detalla el funcionamiento de
cada una de las mquinas, de acuerdo con lo descrito por Garza4.
Tecnologa FMC
Es el tipo de extractor ms utilizado a escala industrial, en la extraccin de
zumos de ctricos para la elaboracin de concentrados.

El principio de funcionamiento se basa en la separacin instantnea de los


elementos constituyentes del fruto (piel, membrana, semillas y otros productos no
deseables) que, de permanecer demasiado tiempo en contacto con el zumo, pue/ 311 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Julin Londoo-Londoo

den tener una influencia adversa para la calidad final del producto. La extraccin
rpida evitar que pasen al zumo sustancias procedentes de las semillas, membranas y corteza que pueden producir amargor y sabores extraos. Como resultado se
obtiene un zumo de gran calidad. El proceso se realiza muy rpidamente, ya que
estos extractores pueden alcanzar casi 100 ciclos por minuto. La seleccin del tamao de las copas se hace en funcin del rango de tamaos de la fruta a procesar.
En general, la fruta, previamente calibrada por tamaos, llega al extractor a
travs de una cinta transportadora y se posiciona automticamente en la parte
inferior de la copa. Una cuchilla de acero inoxidable situada en la parte superior (upper cutter) corta un crculo de corteza en la parte superior del ctrico,
para permitir la separacin de la corteza de las porciones interiores de la fruta.
En la parte inferior otra cuchilla (lower cutter) corta una porcin de corteza
para permitir el acceso del cilindro de tamizado (prefinisher tube) al interior
del fruto. La copa superior (upper cup) y la copa inferior (lower cup) sujetan
el fruto durante todo el proceso de exprimido para evitar su rotura.
El cilindro de pretamizado separa los elementos internos del fruto en funcin de su tamao; el zumo y la pulpa pasarn a travs de los orificios del pretamizador y se depositarn en el depsito de zumo (juice mainfold), mientras
que las membranas y semillas se descargarn por el tubo inferior (orifice tube).
Las etapas del proceso pueden ser descritas de la siguiente forma (figura 1):
t Primera fase de extraccin. En esta primera fase del ciclo de extraccin,
la copa superior se desplaza hacia abajo provocando una presin en el ctrico de forma que las cuchillas superior e inferior comienzan a cortar los
extremos superior e inferior del fruto. El diseo de las copas permite que el
fruto quede perfectamente sujeto, evitando que se rompa, y consigue una
extraccin uniforme durante todo el proceso.
t Segunda fase de extraccin. Cuando el ciclo de extraccin contina, los
dedos de las copas se entrecruzan y el aumento de presin sobre el ctrico
obliga al zumo, y a las partes interiores del fruto (zumo, pulpa, membranas
y semillas) a pasar a travs del fondo al cilindro tamizador, a la vez que la
corteza empieza a salir por la parte superior, entre la copa y la cuchilla.
t Tamizado. Una vez finalizada la extraccin, las porciones interiores del ctrico
se hallan localizadas en el interior del cilindro tamizador. En este momento, el
tubo del orificio se mueve hacia arriba, presionando el contenido del cilindro
tamizador, lo que provoca que el zumo y la pulpa pasen a travs de los orificios del tamiz y pasen al depsito colector de zumo. Las partes del fruto de
/ 312 /

ndustrializacin de ctricos y valor agregado

mayor tamao, que no pueden atravesar el tamiz, son descargadas por un orificio en el tubo inferior y evacuadas fuera de la mquina. Las cortezas, rotas al
ser forzadas a pasar a travs de los dedos de las copas, se eliminan por la parte
superior de la mquina y se depositan en un colector. Durante la extraccin,
las pieles forzadas a pasar a travs de los dedos de las copas, sueltan el aceite
esencial contenido en las vesculas. Este aceite puede ser arrastrado mediante
una corriente de agua y recogido por separado como una emulsin de aceite.
1

Figura 1. Esquema del proceso de extraccin de zumo


de ctricos empleando la tecnologa FMC.
Fuente: Garza4.

Tecnologa Zumex
Este tipo de mquinas extractoras se utilizan principalmente para la obtencin de zumo fresco a pequea y mediana escala.

Su principio de funcionamiento, es bastante simple y se basa en partir el


fruto por la mitad y hacer pasar las mitades entre dos cilindros giratorios que
presionan el fruto y extraen el zumo (figura 2).
El original y simple sistema de extraccin se basa en unos tambores macho
y hembra que con una perfecta sincronizacin extraen el zumo de la pulpa de
la fruta, que previamente ha sido cortada en dos mitades por medio de una
cuchilla ubicada en el compartimento superior de la mquina.
Su gran peculiaridad reside en que en ningn momento las bolas de exprimido estn en contacto con la corteza de la fruta, sino solo con la pulpa,
para evitar el sabor amargo y obtener, por tanto, un zumo de alta calidad. Este
sistema permite as, un rendimiento de hasta el 95%.
/ 313 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Julin Londoo-Londoo

Figura 2. Esquema de una mquina extractora de zumos de ctricos


empleando la tecnologa zumex. En el recuadro derecho se detalla
el sistema de cilindros giratorios.
Fuente: www.zumex.com

Ambas extractoras presentan muy buena eficiencia para los rangos de tamaos de frutos recomendados. Sin embargo, pueden ocurrir prdidas en los
rendimientos de zumo y aceite esencial debido a la rotura de los frutos cuando
piezas demasiado grandes o pequeas alimentan una determinada copa. Este
problema se reduce mediante la seleccin por calibrado del tamao de fruto
adecuado antes de la extraccin5.
En general las copas estn diseadas para calibres entre 65-78 mm para naranjas, y para mandarinas y limones se pueden solicitar copas para dimetros
inferiores a 65 mm. La empresa Zumex Group S. A. pone a disposicin en su
web el siguiente calibrador manual para frutos (figura 3).
Los autores lvarez; et al.6 estudiaron el efecto de diferentes tecnologas industriales de exprimido (tipo FMC y tipo Zumex) sobre los parmetros qumicos y sensoriales del zumo de mandarina Clementina, y observaron diferencias
significativas entre las dos tecnologas con respecto al perfil qumico de aromas
y sensorial de los zumos (figura 4). Sin embargo, no se observaron diferencias
significativas en los parmetros fsico-qumicos de los mismos, pero s un rendimiento en zumo muy superior para la tecnologa de exprimido FMC (tabla 1).
/ 314 /

ndustrializacin de ctricos y valor agregado

Figura 3. Calibrador Zumex de naranjas para zumo.


Fuente: www.zumex.com

Figura 4. Anlisis sensorial por aproximacin multidimensional


de zumos de mandarina Clementina obtenidos por diferentes
metodologas de exprimido.
/ 315 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Julin Londoo-Londoo

Tabla 1. Efecto de la tecnologa de exprimido sobre los parmetros


de calidad del zumo.
Zumo
(%)

pH

c. ascorbico
(mg/100mL)

12,4 a

ndice de
madurez
(SST / AT)
13,9 a

52.1 b

3,6 a

49.7 a

12,5 a

13,9 a

37.0 a

3,5 a

47.6 a

Tecnologa
de exprimido

Dimetro
(mm)

c. ctrico
(g/100mL)

SST
(Brix)

FMC

57,9 a1

0,90 a

ZUMEX

58,8 a

0,93 a

Los datos seguidos de la misma letra en la misma columna no difieren para P< 0.05.

El zumo obtenido por FMC present, en general, una calidad ms alta


que aquel obtenido por Zumex: un mayor color amarillo, mayor presencia de
contenido fibroso y celular, menor olor ctrico, menor sabor amargo, mayor
sabor frutal, menor sabor a cscara de ctrico, menor sabor verde y menor
sabor picante, al compararlo con el zumo obtenido por Zumex.
Produccin de zumo de naranja concentrado y congelado

Existen distintos tipos de zumos concentrados congelados de naranja: turbios, clarificados, y de diferentes grados de acidez.
El proceso de produccin de zumo se gua por un diagrama de flujo que
es donde se representa la trayectoria que sigue el zumo, desde que entra en
forma de materia prima, hasta que se transforma y se convierte en producto
terminado, listo para degustar por el consumidor (figura 5).
El riesgo de contaminacin microbiana durante todo el proceso es
muy grande, por la mala manipulacin debida al equipo, al manipulador, al mantenimiento deficiente o al ambiente. Es fundamental que
en todo momento las instalaciones estn en perfectas condiciones de
limpieza e higiene.
Para asegurar la calidad final del producto se deben hacer anlisis microbiolgicos de todo el producto final.
Las diferentes etapas del proceso general de produccin de zumo de naranja, concentrado y congelado, se describen a continuacin:
t Recepcin e inspeccin de la fruta
La materia prima deben ser frutos frescos de diferentes variedades recibidos
directamente de campo. Tambin se puede recibir zumo no pasteurizado
en tanques. La materia prima se entrega limpia, bien mantenida, y en vehculos cubiertos.
/ 316 /

ndustrializacin de ctricos y valor agregado

La fruta fresca se transporta a la planta en camiones con capacidad de


remolque de hasta 20 toneladas. El descargue puede ser relativamente
simple o se pueden emplear ramblas hidrulicas para descargar la fruta
por gravedad sobre cintas transportadoras. Por regla general, se hacen
pruebas al azar para determinar el nivel de maduracin de la fruta y su
contenido de zumo. Luego se determina el nivel de azcar y acidez, que
a menudo son los criterios para la compra de la fruta y para la mezcla
seleccionada de lotes, con el fin de obtener parmetros especficos de
calidad2.
t Procesamiento
Primeramente los frutos son descargados de los bins o contenedores, luego los frutos se enjuagan en agua potable, se clasifican (1 seleccin), y
se almacenan en bins. Cuando la fruta se remueve de los bins se lava con
cepillos con un detergente neutro o desinfectante, y se enjuaga con agua
potable. Para el lavado tambin se puede emplear agua condensada fra
ganada de la evaporacin del zumo.
Los frutos son seleccionados nuevamente (2 seleccin), luego son calibrados y se envan a los extractores de zumo. La pulpa es removida de la
mquina extractora de zumo a travs del cilindro tamizador para filtrar y
homogeneizar el zumo para conseguir una emulsin estable; y el zumo es
bombeado para un tanque de camisa.
El zumo que se obtiene puede ser centrifugado para reducir el nivel de
pulpa y de defectos.
Seguidamente el zumo es desaireado (vaco a una temperatura de aproximadamente 60C durante dos minutos) para eliminar el oxgeno disuelto
y ocluido, y evitar as la oxidacin acelerada durante la pasteurizacin. Un
mal manejo de esta fase produce el oscurecimiento del zumo.
Despus los zumos son mezclados en un tanque de compensacin para
pasteurizacin. El zumo es pasteurizado (65 C durante 30 minutos) en
un intercambiador tubular o de placas. Una vez transcurrido el tiempo,
la operacin se completa con el enfriamiento rpido del producto hasta
una temperatura de 5 C, a fin de producir un choque trmico que inhibe el crecimiento de los microorganismos que pudieran haber sobrevivido al calor.
Los zumos de frutas tienen un pH cido (< 4,0) por lo que las bacterias no
son muy resistentes a la temperatura, lo que permite reducir los tiempos
/ 317 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Julin Londoo-Londoo

de tratamiento y las temperaturas de forma que la calidad nutricional y


sensorial del producto no sea alterada.
Las operaciones de extraccin, filtrado, pasteurizacin y envasado deben realizarse en forma rpida porque el zumo de naranja se oxida
fcilmente y se altera el sabor. En el proceso se deben controlar la temperatura y el tiempo de pasteurizacin, as como la temperatura de
enfriamiento8, 9.
t Almacenamiento
El zumo pasteurizado es bombeado para un tanque de camisa de congelado entre -18 y -10C, o por el proceso de llenado es envasado en doble
bolsa y congelado a esa temperatura. Estos tanques tienen una capacidad
de hasta 250.000 galones.
t Envasado, empacado y despacho
Para el envasado de este tipo de zumo hay diferentes posibilidades:
t Los envases ms usados son los tambores de chapa de 200 L con pintura interior sanitaria y doble bolsa de polietileno, de las cuales la interior
puede o no ser cerrada con pico de envasado.
t Envases plsticos de distintas capacidades, los cuales vienen cerrados
con tapa y estriles en su interior. Estos envases son usados por empresas elaboradoras de bebidas gaseosas, con un peso determinado
y caracterstico de cada empresa. Son de un solo uso y no tienen
retorno.
t Bines de madera con bolsas especiales de 2 y 3 capas en su interior,
con capacidades que van desde los 500 hasta los 1.000 Kg. Tambin
son envases usados por las empresas. Al igual que los envases plsticos,
estos tambin son sin retorno.
t Tanques contenedores, en los cuales se envasa una carga completa de
18-20 Ton, y donde el espacio de cabeza se compensa con atmsfera de
nitrgeno. Se utilizan para envos al exterior7.
El zumo pasteurizado y congelado puede ser empacado en cajas de
cartn, las cuales se cierran, codifican, sellan, paletizan y se almacenan en
cmara frigorfica. El producto final se despacha en camiones limpios y
refrigerados.
/ 318 /

ndustrializacin de ctricos y valor agregado

Recepcin e inspeccin
de la fruta
Incluye el lavado de la fruta
con agua clorada y el pasaje
por cepillos o detergentes.
En cualquier caso se hacen
lavados posteriores

Lavado - Desinfeccin

Seleccin manual

La clasificacin por tamao


se hace con maquinas
calibradoras y !ene gran
importancia en el
rendimiento de extraccin

Clasificacin

Extraccin

Existen dos sistemas: el de


cabezas giratorias y el de
extraccin integral con
posterior recoleccin de
aceite

Filtracin

Centrifugacin

Se realiza en jugos para


bebidas gasificadas donde se
requiere bajo contenido de
pulpa sedimentada y
ausencia de pulpa flotante

El obje!vo es reducir la
carga microbiana y
desac!var las enzimas,
u!lizando pasteurizadores
de placas o tubulares

Reduccin del contenido de


pulpa a los valores exigidos
por el comprador

Tamizado vibratorio
(opcional)

Desaireado

Pasteurizacin

Concentracin

Eliminar oxigeno disuelto y


ocluido para evitar oxidacin
acelerada en la
pasteurizacin que alterara
las propiedades sensoriales
y nutricionales

Se u!lizan evaporadores de
placas o tubulares

Envasado

Jugo concentrado
de naranja

Figura 5. Diagrama de flujo del proceso industrial


de zumo concentrado y congelado de naranja7.
/ 319 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Julin Londoo-Londoo

Produccin de zumo de naranja sin concentrar (NFC)


El zumo NFC es un producto ms cercano al zumo de naranja fresco y
que viene, adems, en empaque listo a servir. Este satisface las exigencias de
los consumidores en cuanto al buen sabor, a un producto que es menos procesado y con ms trozos de fruta. Incrementa, adems, los conocimientos de
los consumidores respecto a la salud y valor nutritivo de los ctricos, factor
importante relacionado con el aumento de las ventas del zumo NFC2.

Este producto se fabrica siguiendo un estricto proceso de pasteurizacin,


que minimiza, de esta manera, la exposicin al calor.
Las diversas tecnologas que facilitan el almacenamiento de grandes volmenes hacen posible mantener la oferta de zumo durante todo el ao. De uso
comn son el almacenamiento asptico de grandes cantidades en los tanques
finca, los sistemas de bolsa en barril o bolsa en caja y el almacenamiento congelado. El almacenamiento asptico es econmicamente ms viable que el congelado por la facilidad de manejo, y la economa de energa, y puede alcanzar
capacidades de un milln de galones por tanque. Un envase comn para este
tipo de zumo es el Tetra Pak, para que las caractersticas organolpticas (color,
olor y sabor) y las propiedades de la fruta se mantengan intactas. Al tratarse de
un producto natural pasteurizado, la distribucin es hecha en cadena de fro.
Otros factores importantes en la produccin del zumo NFC son el control
del aceite de la cscara y el nivel de amargor en el zumo.
Calidad en los zumos de fruta
Como regla general, los mercados exigen determinados ndices de calidad para
los frutos ctricos con destino al consumo en fresco y a la transformacin industrial, producidos en diferentes regiones del mundo, regulados en diversos documentos legales. Estos ndices son necesarios para evitar la recoleccin de frutos no
aptos y la llegada de estos al mercado con un nivel de calidad no aceptado por el
consumidor10, as como evitar los cambios en olor y sabor del zumo o su contaminacin microbiolgica11 cuando se destinan al procesamiento industrial.
mportancia de la materia prima
Los parmetros de calidad de los zumos son uno de los factores ms importantes porque el consumidor final los percibe como garanta de calidad y los
identifica con la marca, con lo cual se consigue su fidelizacin y la diferenciacin en el mercado. Dado que la fruta es un producto natural, los parmetros
pueden fluctuar ligeramente en consecuencia de factores externos.
/ 320 /

ndustrializacin de ctricos y valor agregado

Adems de la legislacin para elaborar los zumos de frutas, hay que tener en cuenta la legislacin aplicable a los productos alimenticios relativos a
control, higiene, y seguridad alimentara: sistemas de prevencin basados en
HACCP (Hazard Analysis and Critical Control Points - Anlisis de Peligros y
Puntos Crticos de Control)
El factor ms importante en la elaboracin de zumos de fruta es la seleccin de materias primas de alta calidad y de proveedores que sean capaces de
mantenerla de forma constante. Cuando se va a desarrollar un nuevo producto, lo primordial es homologar la materia prima que va a constituirlo y el
proveedor que la suministra.
As, esta debe de cumplir una serie de parmetros de calidad, organolpticos, fsico-qumicos, y microbiolgicos que se recogen en las fichas tcnicas
elaboradas para cada variedad de fruta con que cuentan las empresas para
manufacturar los diferentes zumos.
Los parmetros de calidad mas utilizados para zumos son:
t Brix
t Extracto libre
t Monosacridos
t Disacridos
t cidos
t ndice de formol
t cidos bigenos
t Etanol, entre otros.
Para establecer los parmetros adecuados de calidad hay que tener en cuenta que estos valores no solo dependen de la especie de fruta en cuestin, lugar
de crecimiento, grado de madurez, clima, fertilidad de la tierra y otra medidas
de cultivo, sino que tambin dependen de la variedad de la fruta dentro de
la misma especie, del sistema de plantacin y de la tcnica de proceso usada.
En Colombia, por ejemplo, las naranjas Valencia producidas por encima de
los 900 m. s. n. m. (2 piso) tienen ms grados Brix y son ms cidas, y tienen un
menor ndice de madurez, con respecto a la misma variedad producida por debajo
de los 700 m. s. n. m. (1 piso), debido a las condiciones climticas diferentes sobre
todo de temperatura y luminosidad. De esta forma, la Norma Tcnica Colombiana
/ 321 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Julin Londoo-Londoo

para naranjas12 establece que la naranja Valencia cultivada en el primer piso tiene
mejores caractersticas organolpticas y puede ser recogida ms temprano (con grado de color 3), mientras que los frutos cultivados en el segundo piso trmico deben
de ser recogidos a partir del color 4 para ser comercializados en fresco o procesados.
Varios autores han encontrado diferencias entre el contenido vitamina C, y contenido y perfil de flavonoides y carotenos, para diferentes cultivares de ctricos13-15.
Parmetros mnimos de calidad y los mtodos de anlisis
Para que se pueda asegurar el control de la calidad comercial de los zumos de
frutas y evitar el fraude al consumidor y la competencia desleal, muchas empresas
han considerado necesario disponer de determinados parmetros analticos mnimos de autenticidad y calidad, que permitan evaluar la composicin de los mismos.

Como criterios de calidad se entiende que los zumos de frutas debern


tener el color, aroma y sabor caractersticos del zumo del mismo tipo de fruta
de la que proceden. La fruta no deber retener ms agua como resultado de su
lavado, tratamiento con vapor u otras operaciones preparatorias que la que sea
tecnolgicamente inevitable. Por autenticidad se entiende el mantenimiento
en el producto de las caractersticas fsicas, qumicas, organolpticas y nutricionales esenciales de la fruta o frutas de que proceden.
En general, se pueden utilizar los mtodos oficiales de anlisis (AOAC), y
tambin, de forma complementaria o alternativa, los mtodos aprobados por
organismos nacionales (UNE-EN) o internacionales como el Codex Alimentarius o cualquier otro mtodo debidamente validado.
El CODEX STAN 247-20053 establece los mtodos de anlisis y de muestreo para los parmetros de calidad y autenticidad en zumos de frutas, y describe cada uno de los mtodos oficiales analticos que se pueden utilizar para
determinar estos parmetros. Tambin la Orden de 29 de enero de 198816,
aprueba los mtodos oficiales de anlisis de zumos de frutas y otros vegetales y
sus derivados. Segn este decreto, los parmetros Brix, maltosa e isomaltosa,
deben considerarse como parmetros absolutos de autenticidad y calidad para
los que no deben admitirse tolerancias.
En la tabla 2, por ejemplo, podemos ver los parmetros mnimos de
autenticidad y calidad para el zumo de mandarina que establece el REAL
DECRETO 1518/2007, de 16 de noviembre del MINISTERIO DE AGRICULTURA, PESCA Y ALIMENTACIN de Espaa17. En el anexo se puede
consultar los parmetros para el zumo de naranja.
/ 322 /

ndustrializacin de ctricos y valor agregado

Tabla 2. Parmetros mnimos de autenticidad


y calidad para el zumo de mandarina.
Parmetros

Unidad de
medida

Densidad relativa 20/20

Valor

Observaciones

min. 1,042

Zumo directo

Grado Brix
correspondiente

Brix

min. 10,5

Zumo directo

Densidad relativa 20/20

Brix

min. 1,045

Zumo a base de concentrado

Grado Brix
correspondiente

Brix

min. 11,2

Zumo a base de concentrado

Acidez valorable a pH 8,1

meq/L

90 - 300

Los valores indicados corresponden a 5,8


- 19,2 g/L, calculados como cido ctrico
anhidro pH 8,1

cido ctrico

g/L

6 - 22

cido D-isoctrico

mg/L

65 - 200

El valor inferior de 65 mg/L se obtiene


en productos de alta ratio. En Clementinas se han observado valores de hasta
40 mg/L.

cido citrico:
cido D-isocitrico

mg/L

max. 130

En Clementinas se han observado


valores superiores de hasta 200

min. 100

La media natural de contenido de cido


L-ascrbico del zumo recin exprimido
esta entre 250 y 350 mg/L. Deben garantizarse los 100 mg/L de cido L-ascrbico a la fecha de consumo referente

cido L-ascrbico

mg/L

Glucosa

g/L

Fructosa

g/L

Glucosa: Fructosa

Sacarosa

max. 1,0

g/L

20 - 60

Maltosa

ausencia

Isomaltosa

ausencia

Indice de Formol ml. NaOH


0,1M/100 ml

Ml

15 - 26

Cenizas

g/L

2,5 - 5,0

Fsforo total

mg/L

90 - 210

Potasio

mg/L

1000 - 2300

/ 323 /

Algunas variedades de mandarina muestran unos contenidos muy altos de sacarosa, especialmente en productos recin
exprimidos. Su participacin porcentual
en el total de azucares puede ser superior
al 50% y llegar hasta el 70%.

Cuando el valor es inferior al valor


mnimo establecido, debera examinarse
el origen

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Julin Londoo-Londoo

t Slidos solubles. Se determina como descrito en el captulo de Poscosecha,


y tal como vimos en ese captulo, en el proceso de maduracin aumenta el
contenido de azcares en detrimento del contenido de los cidos, de ah
que no se deban utilizar naranjas muy maduras.
t Azcares. Suman alrededor del 75% de los slidos solubles, y estn
equilibrados los azcares reductores (glucosa y fructosa) y los no reductores (sacarosa). Durante el tratamiento y almacenamiento de los
zumos la sacarosa se va hidrolizando y se transforman en azcares reductores. La adicin de azcares est permitida siempre que no exceda
en 15 g/L.
t cidos. Los zumos de ctricos estn constituidos mayoritariamente de
cido ctrico, algo de cido mlico y algo de cido oxlico. La acidez
cambia segn la variedad, zona de cultivo y maduracin de las naranjas.
Se puede aadir cido ctrico al zumo, siempre y cuando no se haya aadido azcar.
t Vitamina C. La vitamina C o cido ascrbico es el componente ms importante de los frutos ctricos normalmente asociado con la salud. Los
zumos de naranja contienen entre 40-70 mg/100mL cuando la cantidad
diaria recomendada es de 60 mg/100mL. Se debe de tener en cuenta que
es fcilmente degradable por el calor y la exposicin al aire y luz, por lo
que los cuidados en los procesos industriales deben de ser extremos para
conservar este componente.
t ndice de formol. Es un parmetro que refleja la presencia de ciertos
aminocidos en el zumo y, por tanto, ndice de la calidad de las naranjas y mandarinas utilizadas. La adicin de cido ctrico y/o azcar lo
disminuyen.
t Cenizas. Son los elementos minerales presentes en todos los alimentos y su
valor puede ser indicativo de la calidad del fruto usado.
t Otros componentes. En relacin con la salud, como el sodio, el potasio y
el fsforo, cuya concentracin debe estar limitada, o conservantes como el
cido srbico y el cido benzico que no deben estar presentes.
t ndice de madurez. Es la relacin entre los Brix y la acidez, y aunque no
es un parmetro de anlisis obligatorio segn la legislacin de zumos, se
debe tener en cuenta que un elevado valor de IM refleja que el fruto posee
una excesiva maduracin.
/ 324 /

ndustrializacin de ctricos y valor agregado

En la tabla 3, se pueden observar los requisitos nutricionales para el


zumo de naranja de acuerdo al Anteproyecto de la Norma Boliviana, APNB
3600817. La misma norma tambin establece los requisitos microbiolgicos y
los lmites mximos de residuos para los zumos y nctares de frutas.
Tabla 3. Requisitos nutricionales para el zumo de naranja acuerdo
al Anteproyecto de la Norma Boliviana, APNB 36008.
Requisitos

Unidad

Naranja
Cuter Valencia

Naranja
Valencia Tarda

Naranja
natal

Valor energtico

Kcal

50,00

50,00

44,00

Humedad

87,32

87,28

88,90

Protena

0,89

0,92

0,73

Grasa

0,20

0,21

0,22

H. de Carbono

11,23

11,22

9,79

Ceniza

0,36

0,37

0,36

Calcio

mg

39,60

34,54

31,22

Fsforo

mg

25,40

23,20

22,75

Vitamina A

ucg

20,10

72,10

19,09

Vitamina C

mg

46,02

54,60

58,50

Fuente: Anteproyecto de la Norma Boliviana, APNB 3600818.

En Colombia, la industria de transformacin para pulpas y concentrados


requiere materia prima con valores superiores a 9Brix, lo que corresponde a
ndices madurez normalmente superiores a 7,519.
Durante el almacenamiento de los zumos de naranja tiene lugar toda una
serie de fenmenos complejos que modifican sus caractersticas organolpticas y su valor nutritivo; es decir, que se encuentran sujetos a un proceso de
envejecimiento. La alteracin del color del zumo durante su almacenamiento
se debe al pardeamiento originado principalmente por la oxidacin del cido
ascrbico a furfural desprendindose CO2 y por la aparicin de 5-HMF (Hidroximetilfurfural) como consecuencia de la degradacin de los azcares20.
De ah que su contenido haya sido propuesto como un ndice, para el control
de calidad, de tratamientos trmicos o almacenamiento inadecuados21.
Muy probablemente son el sabor y el aroma las caractersticas ms importantes del zumo y tambin las que acusan los cambios ms notables durante
/ 325 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Julin Londoo-Londoo

el almacenamiento prolongado de este. Ambos estn asociados a la presencia de constituyentes voltiles que se encuentran en bajas concentraciones22.
Cualitativamente se han identificado ms de 200 constituyentes voltiles en
el zumo, y el terpeno d-limoneno es el mayoritario (aproximadamente el
90%)23. Este no posee una marcada influencia sobre el sabor del zumo, no
obstante, es el precursor del aroma envejecido (off-flavour) que produce el
-terpineol principalmente.
El nivel de -terpineol en el zumo de naranja es un parmetro de calidad:
indica la prdida de esta por el efecto del almacenamiento21 o de un tratamiento trmico intenso24.
El tipo de envase usado posee una gran influencia en la degradacin del
zumo en general (principalmente por su permeabilidad al oxgeno), pero muy
especialmente influye en el sabor y el aroma del mismo. As, un zumo envasado en lata no lacada origina un olor y sabor amargos debido a la formacin de
nootkatona por oxidacin del valenceno en contacto con la superficie metlica22. Con el envase TetraPack se observa un rpido descenso del d-limoneno
por absorcin de este por la capa de polietileno del envase. Este descenso de
d-limoneno es de un 40% y su consecuencia inmediata es una disminucin
en la formacin de -terpineol (causante del off-flavour)25. Un proceso industrial inadecuado (temperaturas altas, excesiva aireacin, entre otros) tambin
acenta la degradacin del zumo.
Guerrero et al.26 evaluaron la estabilidad del zumo de naranja reconstituido a partir de concentrado (65 Brix) y posterior flashpasteurizacin
(105 -115C durante 3 segundos), envasado en Tetra Brik y almacenados
a 2, 20 y 40C. Los autores encontraron que el cido ascrbico, el HMF
y la sacarosa se pueden considerar como buenos indicadores del envejecimiento del zumo. El cido ascrbico disminuy un 2% con el aumento
del tiempo y la temperatura de almacenamiento. El contenido en HMF
experiment un claro incremento del 14,8% con el tiempo y con la temperatura, al contrario de lo que sucedi con la sacarosa, cuyo contenido
decreci con el tiempo.
La limonina es la responsable del amargor del zumo de naranja. El cido limonoico, en su forma monolactona A, es el componente precursor no
amargo de esta limonina en un medio cido, y se encuentra en el albedo y las
semillas, y es el principal responsable del amargor de la naranja con el tiempo,
y principal factor de calidad de la naranja de zumo directo. La naranja Navel
es muy rica en cido limonoico.
/ 326 /

ndustrializacin de ctricos y valor agregado

La calidad de los zumos de naranja se puede clasificar en funcin de la


concentracin de limonina:
t 6 ppm - zumo no es comercializable.
t > 4 ppm - zumo de mala calidad.
t < 4 ppm zumo de buena calidad.
t < 2 ppm zumo de excelente calidad27.
Los aos lluviosos y fros son malos para la calidad organolptica del zumo
de naranja porque en estos aos la naranja no madura suficientemente bien, y
este precursor pasa a limonina ms fcilmente cuando se exprime el fruto. Es
decir, mientras ms cido sea el zumo final, mayor es la capacidad del precursor para pasar a la forma amarga.
Sin embargo, cuando la naranja madura en el rbol, el cido limonoico puede pasar de forma natural a su derivado 17-dehidroderivado no amargo a travs
de la limonoato deshidrogenasa, por lo que para obtener una naranja de buena
calidad es preferible pagar al agricultor para que mantenga la fruta en el rbol
hasta su momento ptimo de cosecha, para que no se amargue rpidamente27.
Los diferentes procesos de pasteurizacin tambin incrementan la concentracin de la limonina, por lo que es importante medir la cantidad inicial de
precursor, dado que a menor cantidad ms calidad.
La combinacin de tcnicas analticas (HPLC-CGSM, Cromatografa
Lquida combinada con Cromatografa de Gases-Espectrometra de Masas)
combinada con los datos sensoriales aportados por un panel de catadores entrenados nos permite conocer indicadores fundamentales para evaluar la calidad organolptica de un zumo de naranja directo28.
Adems, conocer estos indicadores permite mejorar los procesos de envase
y condiciones de distribucin, y mejorar la calidad final del zumo directo para
evitar la desaparicin de sustancias que cambian el perfil organolptico.
Se debe de tener en cuenta que la eliminacin total de aire en el proceso
de desaireacin reduce de forma significativa la eliminacin de compuestos
voltiles importantes para el sabor caracterstico del zumo.

Extraccin aceites esenciales


En el mundo los principales aceites esenciales de ctricos comercializados son
el de naranja (28.000 Ton en 2001) y limn (6.510 Ton en 2002). El precio del
/ 327 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Julin Londoo-Londoo

aceite de naranja puede estar entre 0,7-3,3 $USD / Kg. El principal componente del aceite ctrico comercializado es el d-limoneno mayoritariamente proveniente de naranjas. El petitgrain es un aceite muy buscado por las perfumeras
que se obtiene de las hojas de los arboles ctricos, y es Paraguay su principal
productor y exportador en el mundo. Su rendimiento es del orden del 0,2% y
su precio en el mercado es muy alto29.
Para la obtencin del aceite esencial de ctricos los procesos utilizados
son: extraccin, extraccin con disolventes voltiles, desterpenacin y destilacin al vaco.
Extraccin

Al exprimir por mquinas puede producirse un aceite casi idntico al producto exprimido a mano y es un mtodo aplicado en forma comercial. Son
dos los mtodos empleados para la extraccin de aceite esencial ligada de una
forma u otra a la de extraccin de zumo: mtodo de raspadura y mtodo de
esfumadura o espumadora conocido en italiano por sfumatura. Segn Di
Giacomo y Mincione30, el primer mtodo se considera idneo para la transformacin en continuo de grandes cantidades de fruto, mientras el proceso de
sfumatura se prefiere en empresas de tipo medio o artesanales especializadas
en producir aceites esenciales de calidad exquisita.
En el primero los frutos se someten a raspado liberndose el aceite esencial de las glndulas, junto con restos de corteza, bajo la accin de una fina
lluvia de agua que arrastra al aceite y los detritus hacia una refinadora que
filtra y separa la emulsin oleosa de las partculas en suspensin; mediante la
centrifugacin se obtiene de dicha emulsin una fase acuosa que se somete a
recirculacin, otra emulsin que se somete a destilacin y una fase oleosa que
tras una nueva centrifugacin produce un efluente acuoso que es enviado a
destilacin, y el aceite esencial.
En el mtodo de sfumatura se acta sobre la corteza una vez se ha extrado el zumo, presionndola y comprimindola repetidamente para lograr la
salida del aceite esencial de las glndulas que es arrastrado por una fina lluvia
de agua, dispuesta oportunamente en el interior de la mquina. La fase lquida se filtra para separarla de los restos de corteza y se somete a una primera
centrifugacin en la que se obtiene una emulsin enriquecida en aceite esencial -cerca de un 80%- y una fase acuosa que se recircula tras decantacin. La
fase oleosa sometida a una segunda centrifugacin permite obtener el aceite
esencial y una fraccin acuosa con un elevado contenido en ceras. Los restos
/ 328 /

ndustrializacin de ctricos y valor agregado

de corteza se prensan aadiendo agua -siempre en forma de fina lluvia- lquido que a continuacin se somete a destilacin en corriente de vapor y bajo
condiciones de vaco.
En cuanto a maquinaria se refiere, se pueden mencionar las siguientes:
Pickin Roll, Screw press, Fraser-Brace excoriator, AMC scarifier, Brown peel
shaver, entre otras, que recuperan el aceite del fruto en un paso previo a la
extraccin de zumo31.
En la patente para la Brown International Corporation, se describe el sistema como una cama de rodillos con superficies punzantes o abrasivas. Los
frutos avanzan en una sola capa y se van rompiendo las glndulas oleferas del
pericarpio, y queda el aceite recogido en el agua de arrastre, formando una
emulsin que se descarga sobre una prensa y pasa posteriormente a travs de
un separador de partculas y centrifuga para separar el aceite esencial. Los aceites as obtenidos cumplen las especificaciones de la USP, excepto lo referente
a los residuos de evaporacin32.
Siguen tambin este sistema las mquinas Pelatrice (peladora) que
producen el raspado del fruto completo mediante varios pares de rodillos
-entre tres y seis- de superficie punzante dispuestos trapezoidalmente con
el eje longitudinal paralelo al sentido de avance de los frutos. La velocidad
de carga y la de rotacin de los rodillos depende del ctrico que se trate,
de su estado de maduracin; la forma del fruto condiciona el tiempo de
procesado de los mismos, y son necesarios tiempos ms prolongados en
el caso del limn que en la naranja y frutas no ovaladas, por ejemplo, el
modelo de seis pares de rodillos, procesa entre doce y catorce toneladas de
naranja en una hora30.
Otros tipos de maquinaria como Torchio (prensa) y Sfumatrice (esfumadora) -Speciale e Indelicato- obtienen el aceite esencial de un fruto al
cual ya se ha extrado el zumo. El tipo Torchio produce el prensado de la
corteza mediante dos hlices que giran en sentidos opuestos, hlices situadas
en jaulas que hacen de filtro y abrasivo al estar surcadas longitudinalmente por
fresas y talladas con fisuras calibradas para permitir la salida de la esencia. El
tipo de mquinas -de implantacin casi exclusiva en Sicilia- denominadas sfumatrice, poseen una cinta sin fin, modelada a propsito con salientes orientados hacia una superficie fija, provista a su vez de protuberancias. La distancia
entre estas y las de la cinta sin fin se regula de modo que se consigue la escarificacin de la corteza, procurando que no se rompa la corteza totalmente y sea
rentable la proporcin de aceite esencial obtenida.
/ 329 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Julin Londoo-Londoo

Por ltimo, nos encontramos con maquinaria que hace simultneamente


la separacin de zumo y aceite esencial. Entre estas se puede citar la Unidad
mondadora-esfumadora (Indelicato), el extractor FMC In-Line (Food Machine Corporation) y el extractor pelatrice Speciale que es capaz de procesar
entre 5.000 y 15.000 Kg de limn por hora y que, junto con el anterior, son
los sistemas ms utilizados en la cuenca Mediterrnea.
En la FMC In line, como ya vimos antes, las partculas de la corteza
(raspaduras o frit) son separadas resultando una emulsin aceitosa, con
tres componentes: agua, gotas de aceite esencial y slidos finos que han
atravesado el finisher. Para que este funcione correctamente, se debe asegurar que el finisher empleado tenga capacidad para procesar la mezcla
con que es alimentado y retenga los slidos particulados. La presin del
mismo debe de ser cuidadosamente controlada de forma que se consiga
una presin intermedia, ya que si es alta muchos slidos y pectinas pueden
ser forzados a pasar a la emulsin, con lo que aumentara la viscosidad y
dificultara la separacin en las centrfugas, y si es muy baja se perdera gran
cantidad de agua y aceite esencial expulsados fuera del sistema a travs de
la corriente de raspaduras. Usando cabezas de aire o mecnicas se consigue
una presin media que permite que la emulsin que va a la primera centrfuga tenga en torno a un 2-4% de slidos que se pueden separar mediante
centrifugacin a 4500 r.p.m.
Acoplando dos centrfugas se recupera la prctica totalidad del aceite esencial contenida en la emulsin ligera procedente del finisher como aceite
esencial puro. El paso por la primera centrfuga se conoce como concentracin o deslodado o desludging, y el paso por la segunda como refinado o
polishing.
El ltimo paso del proceso de recuperacin del aceite en frutos ctricos es
el refinado polisher, que consiste en pasar la emulsin enriquecida a travs
de una centrfuga de alta velocidad, que opera entre las 16000 y las 18000
r.p.m., con lo que consigue separar el aceite esencial del agua sobrenadante,
decantando al mismo tiempo las partculas slidas presentes en la emulsin.
Segn FMC5 la instalacin de sistemas de centrifugacin bajo dimensionados contribuye a prdidas entre el 50-60% de aceite esencial en el sistema; por
ello, es fundamental instalar sistemas con capacidad suficiente para procesar
eficazmente toda la emulsin procedente del finisher y evitar as prdidas
importantes de aceite. Tras la centrifugacin el aceite esencial de limn, es
recogido en un tanque de acero inoxidable, donde floculan las ceras33.
/ 330 /

ndustrializacin de ctricos y valor agregado

Extraccin con disolventes voltiles


En la extraccin con disolventes voltiles, el factor ms importante para
lograr xito es la seleccin del disolvente. El disolvente debe:

t Ser selectivo, esto es disolver rpida y totalmente los componentes odorferos, con solo una parte mnima de materia inerte.
t Tener un bajo punto de ebullicin.
t Ser qumicamente inerte al aceite.
t Evaporase completamente sin dejar cualquier residuo odorfero.
t Ser de bajo precio, y de ser posible, no inflamable.
Se han empleado muchos disolventes, pero el mejor es el ter de petrleo
altamente purificado, y el benceno es el que sigue. El equipo de extraccin es
complicado y relativamente costoso. Los dos tipos de extractores usados son
el estacionario y el rotatorio.
Desterpenacin
En algunos aceites existe una gran cantidad de terpenos. Esto sucede especialmente con los aceites de limn y naranja, que contienen hasta 90% de
dlimoneno en su composicin normal. No solo son de poco valor los terpenos y sesquiterpenos para la fuerza y carcter de los aceites, sino que tambin
se oxidan y polimerizan rpidamente en reposo para formar compuestos de
un sabor fuerte y semejante a la trementina. Adems, los terpenos son insolubles con la baja intensidad del alcohol empleado como disolvente, por lo
que forman soluciones oscuras que se aclaran con dificultad. De aqu que
sea deseable eliminar los terpenos y sesquiterpenos de los aceites, por desterpenacin. Se pueden aplicar dos mtodos, ya sea la eliminacin de terpenos,
sesquiterpenos y parafinas por destilacin fraccionada a presin reducida, o la
extraccin de los compuestos oxigenados ms solubles, con alcohol diluido u
otros disolventes34.
Destilacin al vaco
La destilacin al vaco es un mtodo para destilar sustancias a temperaturas por debajo de su punto normal de ebullicin. Este mtodo es tan efectivo
como la destilacin por vapor, pero ms caro. Cuanto mayor es el grado de vaco, menor es la temperatura de destilacin. Si la destilacin se efecta en un
vaco prcticamente perfecto, el proceso se llama destilacin molecular. Este
/ 331 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Julin Londoo-Londoo

proceso se usa normalmente en la industria para purificar vitaminas y otros


productos inestables. Se coloca la sustancia en una placa dentro de un espacio
en el que se ha hecho el vaco y se calienta. El condensador es una placa fra,
colocada tan cerca de la primera como sea posible. La mayor parte del material pasa por el espacio entre las dos placas y, por lo tanto, se pierde muy poco.
El proceso general de extraccin de aceites esenciales de ctricos consta de
varias etapas35:
t Recepcin e inspeccin
El fruto es recibido en el piso y se revisa que sea un fruto bien desarrollado,
entero, limpio de golpes y de consistencia firme, de textura razonablemente lisa y sin signos de putrefaccin o descomposicin.
t Transporte y seleccin
Del rea de recepcin de materia prima, el fruto se transporta a travs de
una banda hacia el rea de lavado y en el trayecto se seleccionan y eliminan
los frutos que presenten signos de descomposicin o que no renan las
caractersticas requeridas.
t Lavado
La banda transportadora eleva los frutos a un tanque de acero inoxidable,
donde recibe chorros de agua a presin desde diferentes ngulos. A travs
de este lavado se eliminan agentes extraos y otros tipos de microorganismos.
t Transporte
Una banda de transporte conduce los frutos del rea de lavado al rea de
extraccin.
t Extraccin
La banda coloca el fruto en una prensa de gusano helicoidal, en forma de
cono de avance con paredes perforadas en donde escurre el zumo. El fruto
es aplastado para romper las celdillas que contiene el aceite esencial; la
prensa mantiene una lluvia para desalojar con rapidez la esencia formando
con ella una emulsin. La cscara y el bagazo pueden ser procesados como
subproducto para ser utilizados como alimento para ganado. A su vez, la
cscara puede ser lavada y deshidratada y sirve como base para la obtencin
de pectinas.
/ 332 /

ndustrializacin de ctricos y valor agregado

t Transporte al rea de destilacin


La emulsin de zumo, aceite y agua se colecta en un tanque receptor,
del cual mediante bombeo se transporta hacia el rea de destilacin.
t Destilacin
El bombeo lleva a la emulsin tambin llamada caldo hasta un tanque de
destilacin, al cual se le inyecta vapor de agua para aumentar su temperatura y lograr la evaporacin del agua y aceite esencial.
t Condensacin y separacin
Los vapores de agua y aceite esencial pasan por un condensador, donde
cambian a forma lquida y por decantacin se separa el aceite esencial del
agua, con la que fue arrastrado y se deposita en un recipiente de lmina
galvanizada.
t Inspeccin
Del recipiente que contiene el aceite, se toman muestras para valorar su
aspecto que debe ser cristalino y no presente turbidez, slidos o agua,
que tenga color ligeramente amarillo de tono casi incoloro, que su olor
sea limpio sin rastros de rancio o quemado y que su sabor no tenga
rastros extraos y, por ltimo, que su densidad relativa sea adecuada,
ya que una densidad relativa baja indica un aceite ligero debido a una
destilacin incompleta. Por otra parte una densidad alta, indica una
destilacin muy prolongada, utilizacin de limones muy maduros o un
aceite muy viejo.
t Envasado
El aceite pasa por medio de bombeo al rea de envasado, que se realiza en
recipientes de lmina galvanizada recubierta de pintura epxica, la cual
evitar la contaminacin del producto.
t Almacn de producto terminado
El aceite se almacena como producto terminado listo para su distribucin.
Dado que los rendimientos de extraccin de aceites esenciales suelen ser
muy bajo (0,1-0,4%), normalmente su extraccin industrial est asociada con
la obtencin de otros productos como puede ser la produccin de cscara
deshidratada como base en la obtencin de pectinas.
/ 333 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Julin Londoo-Londoo

Proceso de produccin de cscara deshidrata


La cscara deshidratada se obtiene del prensado y separacin de la emulsin zumo-aceite del fruto, para posteriormente triturarla y disolver mediante
agua todos los slidos solubles y posteriores secados con aire caliente forzado
a travs de un cilindro giratorio.
La descripcin del proceso para la obtencin de cscara deshidratada consiste en varias etapas35:
t Despus de la extraccin en el proceso para la obtencin de aceite
esencial; prcticamente aqu inicia el proceso para la obtencin de cscara
deshidratada, en donde se obtiene como subproductos de la extraccin:
cscara y bagazo. Este ltimo subproducto se usa para preparar enmelazadas para el ganado, y la cscara se separa para lavarla.
t Lavado: aqu se eliminan posibles vestigios de bagazo o material extrao
que pudiera contaminar la cscara.
t Prensa exprimidora: esta tiene la funcin de eliminar el exceso de agua,
para que facilite el secado.
t Secado: este tiene la funcin de eliminar totalmente el agua contenida en
la cscara, y esto se hace a travs de un secador que pasa el aire caliente a
contracorriente por un secador cilndrico de acero inoxidable.
t Inspeccin: aqu se verifican las propiedades organolpticas de la cscara
deshidratada y se constata el aspecto, el olor, color y el sabor.
t Envasado: se deposita en tolvas o bodega del producto, en donde se envasa
en bolsas de propileno nuevas de 25 a 30 Kg de capacidad.
t Almacenamiento: se almacena en bodega y esta listo para envo o a su
distribucin final.

Valor agregado
En la actualidad se acepta ampliamente que los efectos benficos de las frutas en la prevencin de enfermedades de alto impacto como aquellas de tipo
cardiovascular y ciertos tipos de cncer se deben a sus componentes bioactivos; esto ha conducido a un aumento en la conciencia de los consumidores
acerca de los problemas de salud relacionados con la dieta y ha llevado a buscar alternativas para incorporar en la ingesta diaria algunos componentes que
puedan beneficiar la salud, lo cual ha promovido la aparicin en el mercado
/ 334 /

ndustrializacin de ctricos y valor agregado

de una amplia gama de productos entre los que se cuentan suplementos nutricionales y alimentos funcionales (nutracuticos) o frutas con un mayor contenido de metabolitos activos. Adicionalmente, existe un recelo por parte de
los consumidores frente a aditivos de origen sinttico y, por ende, la demanda
de colorantes, saborizantes y antioxidantes de origen natural ha aumentado
considerablemente en los ltimos aos36.
El consumo de antioxidantes est fundamentado en estudios epidemiolgicos y clnicos que demuestran el enlace entre factores como: dieta, estilo de
vida, exposicin a radiacin, metales, pesticidas, txicos, y algunos medicamentos; con la aparicin y desarrollo de enfermedades como cncer, diabetes,
aterosclerosis, desrdenes neurodegenerativos y envejecimiento. Todas estas
condiciones patolgicas estn asociadas a un estado conocido como estrs
oxidativo, es decir, un aumento en las especies oxidantes (principalmente
Especies Reactivas del Oxgeno ERO-) y/o una disminucin en los mecanismos de detoxificacin.
Las ERO, segn su propio nombre, presentan una reactividad ms alta
que el oxgeno molecular. Algunas de ellas pueden ser radicales libres, es decir, molculas o fragmentos moleculares que contienen uno o ms electrones
desapareados en orbitales atmicos o moleculares. Este electrn desapareado
confiere un grado considerable de reactividad al radical libre y logra, adems,
existir de forma independiente por cortos perodos de tiempo37.
Podramos decir, entonces, que la actividad antioxidante es la capacidad
de una(s) sustancia(s) para inhibir la degradacin oxidativa. En los alimentos, los antioxidantes desempean un papel importante en la determinacin
de su calidad, ya que intervienen en su apariencia, color, olor, acidez, e incluso en sus propiedades potencialmente beneficiosas para la salud humana.
En general, un alimento puede ser considerado funcional si se logra demostrar satisfactoriamente que posee un efecto beneficioso sobre una o varias
funciones especficas en el organismo, que mejora el estado de salud y de bienestar, o bien que reduce el riesgo de una enfermedad. El trmino Alimento
Funcional fue propuesto por primera vez en Japn durante la dcada de 1980
con la publicacin de la reglamentacin de los Alimentos de uso especfico
para la salud (Foods for Specified Health Use o FOSHU).
En Colombia, la normativa actual para el desarrollo de este tipo de productos fue establecida en los decretos 3249 de 2006, 3863 de 2008 y Resolucin 3096 de 2007, en donde se dan las siguientes definiciones:
/ 335 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Julin Londoo-Londoo

t Declaraciones de nutrientes. Es la relacin o enumeracin del contenido


nutricional de un producto.
t Declaraciones de propiedades en salud. Es toda informacin que afirme, sugiera o implique la existencia de una relacin entre un componente
contenido en los productos objeto del presente decreto y una condicin
de salud.
t Declaraciones de propiedades nutricionales. Se entiende por cualquier
representacin que afirme, sugiera o implique que un producto posee propiedades nutritivas particulares incluyendo pero no limitndose a su valor
energtico y contenido de vitaminas, minerales y oligoelementos.
t Suplemento dietario. Es aquel producto cuyo propsito es adicionar la
dieta normal y que es fuente concentrada de nutrientes y otras sustancias
con efecto fisiolgico o nutricional que puede contener vitaminas, minerales, protenas, aminocidos, otros nutrientes y derivados de nutrientes,
plantas, concentrados y extractos de plantas solas o en combinacin.
Especficamente, la Resolucin 3096 de 2007 reglament la rotulacin y
declaraciones de los suplementos dietarios, de tal forma que se establece que
las declaraciones de propiedades nutricionales pueden ser relativas al contenido de los nutrientes, por ejemplo buena fuente de calcio, bajo contenido
de grasa.
Por su parte, en cuanto a las declaraciones de propiedades en salud existen
tres tipos:
t Declaraciones de propiedades relativas a la funcin del nutriente entendidas como aquellas que describen la funcin fisiolgica del nutriente
en el crecimiento, desarrollo y funciones normales del organismo, dentro
de su consumo regular.
Un ejemplo puede ser: El calcio ayuda en el desarrollo de huesos y dientes
fuertes, el producto X contiene Y gramos de calcio.
Para poder hacer esta declaracin es necesario que el producto contenga
mnimo 20% del valor diario recomendado para el nutriente correspondiente.
t Declaraciones de propiedades de reduccin de riesgos. Son aquellas
referencias a la reduccin del riesgo de desarrollar una enfermedad. El
artculo 20 de la resolucin 3096 establece que las declaraciones de propiedades de otras funciones deben ser aprobadas por el INVIMA. El fa/ 336 /

ndustrializacin de ctricos y valor agregado

bricante o titular del registro debe contar con la justificacin que soporte
la veracidad de dicha declaracin y que demuestre que no es engaosa.

Los flavonoides como antioxidantes en zumos de ctricos.


Los flavonoides son constituyentes de amplia distribucin en el reino vegetal; implcitamente se encuentran en todas las plantas, pero su distribucin
cuantitativa vara entre diferentes rganos y en diferentes poblaciones de una
misma planta, gracias a un control gentico interactuando con factores ambientales como madurez, clima, altitud, nutricin y prcticas agrcolas38.
En la figura 6 se puede apreciar el perfil de flavonoides presentes en el
zumo de mandarina Clementina cultivada en La Calera, Per y en el suroeste
antioqueo.
Como se puede apreciar, el zumo de la mandarina Clementina producida
en Tmesis tiene un perfil de flavonoides dominado principalmente por hesperidina, mientras que aquel producido de la fruta cultivada en Per presenta
un pico adicional correspondiente a naringina.
Los flavonoides del tipo rutinsido (como la hesperidina) son menos
amargos que aquellos del tipo neohesperidinsido (como la naringina),
por lo tanto, podra esperarse que el zumo de la fruta cultivada en Tmesis presentar un mejor perfil sensorial comparado con aquel de la fruta
cultivada en Per.

Figura 6. Comparacin entre el perfil de flavonoides (1) del zumo de


mandarina Clementina peruana (2) y cultivada en el suroeste antioqueo (3)
/ 337 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Julin Londoo-Londoo

Adicionalmente, el contenido de hesperidina en los zumos de ctricos depende en gran medida de la metodologa usada para la extraccin39.
En un estudio realizado entre la Universidad de Antioquia y Corpoica, se
ha observado que el zumo de mandarina Clementina obtenido por la tecnologa FMC contiene mayor cantidad de hesperidina que el zumo obtenido
por Zumex, probablemente debido al mecanismo de extraccin, en el cual
existe mayor recuperacin del zumo y probablemente una mayor remocin
de la hesperidina, presente, principalmente en la porcin blanca del fruto
(albedo)40 (figura 7).

Figura 7. Contenido de hesperidina en zumos de mandarina Clementina


obtenida por tecnologas de exprimido FMC y Zumex.

Conclusiones y recomendaciones
La industria de los ctricos en Colombia est an en su fase inicial de
desarrollo, por lo que requiere de una fuerte alianza entre las universidades,
entidades de investigacin, y el sector productivo y empresarial, para lograr
niveles de innovacin y competitividad significativos en los mercados.
Hay algunas empresas que han incursionado en el mercado de zumos de
ctricos en Colombia hace ya algunos aos (Frudelca, Tnez, entre otras), sin
embargo, requieren de estrategias de marketing, innovacin y diversificacin
de productos para se tornaren competitivas.
/ 338 /

ndustrializacin de ctricos y valor agregado

Se requiere analizar posibilidades en I+D+i que viabilicen la diversificacin


de la oferta del sector. Existen oportunidades para seguir desarrollando nuevos
productos a base de ctricos y la deteccin de nuevos mercados para estos desarrollos. La investigacin en nuevos productos en Colombia es an incipiente.
Igualmente, se debe de intensificar la investigacin sobre los residuos de
plaguicidas en la fruta fresca, y sobre el impacto ambiental de la industria,
para cumplir con las crecientes exigencias regulatorias medioambientales.
Es necesario hacer prospectiva tecnolgica e inteligencia de mercados, tanto para las mejoras tecnolgicas del sector como para la conquista de nuevos
mercados, y el manejo adecuado de los mercados ya conquistados. Para ello,
la conformacin de un Observatorio Tecnolgico y Comercial puede ser de
suma utilidad, dado que permitira el estudio de las variables que afectan la
evolucin productiva, tecnolgica y comercial del sector citrcola.
Referencias bibliogrficas
1. FOOD AND AGRICULTURAL ORGANIZATION OF THE UNITED
NATIONS - FAO. Major food and agricultural commodities and producers
statistics. [En lnea]. Rome: Economic and Social Department - The Statistics
Division. 2006. [Consultado el 5 de septiembre de 2011]. Url disponible en:
www.fao.org/es/ess/top/topproduction.html
2. JOHNSON, Teiko M. La produccin de zumo de ctricos y la aplicacin de tecnologa al mercado de productos frescos. China/FAO Simposio Sobre Ctricos.
Lakeland, Florida, USA: FAO, 2001. p. 79-85
3. OMS FAO. Codex Stan 247-2005. Norma general del codex para zumos (zumos) y nctares de frutas. Roma: FAO, 2005. 21 p.
4. GARZA, S. Industrias de zumos de frutas y derivados: tecnologa de la extraccin de zumos. Universidad de Lleida, Guas Docentes. Disponible en la web
http://web.udl.es/usuaris/a1743621/Temas/tema5.html.
5. FMC. The FMC oil recovery system. Tech. Bull. 1980.
6. ALVAREZ, R.; et al. Correlation between chromatographic profiling by HS-SPME and sensory quality of mandarin juices: effect of squeeze technology. Springer. In: International Congress on Engineering and Food. FOOD PROCESS
ENGINEERING IN A CHANGING WORLD. iCEF11. Congress Proceedings. 2011. Vol. III: 2015-2016.
7. BRUZONE, A. I. Zumo concentrado congelado de naranja. Anlisis de Cadena
Alimentaria. En: Revista Alimentos Argentinos, 28. 2005. [Citado el 10 de sep/ 339 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Julin Londoo-Londoo

tiembre de 2011]. Url disponible en http://www.alimentosargentinos.gov.ar/03/


revistas/r_28/Zumo_congelado_naranja.htm
8. DEPARTAMENTO DE SERVICIOS HUMANOS Y SALUD DE EE.UU.
Food and Drug Administration. Center for Food Safety and Applied Nutrition
(CFSAN). 2004. Guidance for Industry. Juice HACCP Hazards and Controls
Guidance. First Edition. [Citado el 15 de septiembre de 2011]. Url disponible
en http://www.fda.gov/Food/GuidanceComplianceRegulatoryInformation/uidanceDocuments/Juice/ucm072557.htm
9. PADRN, J. La calidad en los zumos y nctares de frutas. Grupo Vichy Cataln. [Citado el 05 de septiembre de 2011]. Url disponible en www.grupovichycatalan.es/docs/LAM5_2.pdf
10. GUERRA, F. Tecnologa post-cosecha de frutos ctricos. Curso integral de citricultura. Cuba: Instituto de Investigaciones de Fruticultura Tropical. 1996. p.
242-257.
11. TING, S. V. y ROUSSEFF, R. L. Vitamins Citrus fruit and their products:
analysis and technology New York: Marcel Dekker, 1986. p. 121-136.
12. INSTITUTO COLOMBIANO DE NORMAS TCNICAS Y CERTIFICACIN ICONTEC. Frutas frescas. Naranja Valenciana. Especificaciones. Bogot: ICONTEC, 1997. 15 p. (NTC 4086)
13. DHUIQUE-MAYER, C.; et al. Varietal and Interspecific Influence on Micronutrient Contents in Citrus from the Mediterranean Area. In: Journal of
agricultural and food chemistry. 2005. Vol. 53, No. 6. p. 2140-2145.
14. STUETZ, W.; et al. Polymethoxylated Flavones, Flavanone Glycosides, Carotenoids, and Antioxidants in Different Cultivation Types of Tangerines (Citrus
reticulata Blanco cv. Sainampueng) from Northern Thailand. In: J. Agric. Food
Chem. 2010. Vol. 58. p. 60696074.
15. CANO, A.; MEDINA, A. y BERMEJO, A. Bioactive compounds in different
citrus varieties. Discrimination among cultivars. In: Journal of Food Composition and Analysis. 2008. Vol. 21, No. 5. p. 377.
16. ESPAA. MINISTERIO DE LA PRESIDENCIA. Orden de 29 de enero de
1988 por la que se aprueban los mtodos oficiales de anlisis de zumos de frutas
y otros vegetales y sus derivados. Madrid: Boletn Oficial del Estado BOE. 1988.
11 p.
17. ESPAA. MINISTERIO DE AGRICULTURA, PESCA Y ALIMENTACIN. DECRETO 1518/2007 de 16 de noviembre por el que se establecen
parmetros mnimos de calidad en zumos de frutas y los mtodos de anlisis
aplicables. Madrid: El Ministerio, 2007. 8 p.
/ 340 /

ndustrializacin de ctricos y valor agregado

18. INSTITUTO BOLIVIANO DE NORMALIZACIN Y CALIDAD IBNORCA. Anteproyecto de la Norma Boliviana para Zumo de Naranja APNB
36008. 8 p.
19. RIAO, Nestor; et al. Estudio de crecimiento, fenologa, y pronsticos de
cosecha en Naranja Valencia sobre Sunky x English y Citrumelo 4475 en
la zona centro Occidente de Colombia. Chinchin -Manizales: Cenicaf,
2006. 45 p.
20. MARCY, J.; et al. Factorsa ffecting storage of orange concentraten. In: Journal of
food science. 1984. Vol. 49, No. 6. p. 1628-1629.
21. PINO, J.; RANIVOELISOV, A. y TORRICELL, R. A. Influencia de la temperatura de almacenamiento sobre la calidad del zumo de naranja envasado en frascos de vidrio. En: Rev. agroqum. tecnol. alim. 1987. Vol. 27, No. 2. p. 261-269.
22. PINO, J. y TORRICELL, R. A. Conocimientos actuales sobre los constituyentes voltiles de los zumos ctricos. Boletn de reseas. Ctricos y otros frutales.
N 14. 1983.
23. SIZER, C.; WAUGH, P.; EDSTAM, S.; ACKERMANN, P. Maintaining flavor and nutrient quality of aseptic orange juice. En: Food Technology. 1988.
p. 152-159.
24. ALBEROLA, J.; IZQUIERDO, L. La fraccin aromtica del zumo de naranja.
IV Componentes identificados. En: Rev. Agroquim. Tecnol. Alimen. 1980. Vol.
20, No. l, p. 79-85.
25. DURR, P. Aroma quality of orange juice - a brief review. En: Alimenta. 1980.
Vol. 19, p. 35-36.
26. GUERRERO, L.; VENTURA, F. y BOTA, E. Evolucin qumica de los zumos
de naranja durante su almacenamiento. ARXIUS de I Esc. Sup. dAgricultura de
Barcelona. 1988. N11. p. 59-74.
27. PEROTE, A. Cmo elaboramos un zumo de naranja directo de calidad?. [En
lnea]. [s. n.]: Instituto Mas Pascual, 2006. [Citado el 15 de agosto de 2011].
Url disponible en: http://www.institutomaspascual.es/reportajes/muestra.
asp?id=1727
28. SEGU, M. V.; et al. Determinacin de limonina en zumo de naranja por cromatografa lquida de alta resolucin. En: Revista Espaola de Ciencia y Tecnologa de Alimentos. 1992. Vol. 32, No. 2. p. 165-172.
29. SARAIVA, J. M. Alternativas de industrializacin y procesamiento para ctricos.
Via del Mar, 2003.
30. DI GIACOMO, A. y MINCIONE, B. Gli olii essenziali agrumari in Italia.
Sottoprogetto 4, monografia raisa n3. Rome: Laruffa Editore, 1994.
/ 341 /

Catarina Pedro Pssaro Carvalho, Julin Londoo-Londoo

31. HOLBROOCK, F. K. y BUSHMAN, R. C. Whole fruit peel oil extractor. United States Patent N 4.257.320. FSTA Abstract 12J1863. 1981.
32. KESTERSON, J. W.; HENDRICKSON, R. y BRADDOCK, R. J. Brown oil
extractor. En: Perfumer & Flavorist. 1979. Vol. 4, No. 4. p. 9.
33. KIMBALL, D. A. Citrus Processing: Quality Control and Technology. New
York: Springer, 1991. 473 p.
34. AUSTIN, G. T. 1990. Manual de Procesos Qumicos en la Industria. Vol. 3.
Mxico D.F.: McGraw Hill, p. 680-685
35. VALDES, E. A. Productores y comercializadores de ctricos. [s.l.]: Emiliano Zapata, 2002. 55 p.
36. MOURE, A. S.; et al. Natural antioxidants from residual sources. En: Food
Chemistry. 2001. Vol. 72, No. 2. p. 145-171.
37. VALKO, M.; et al. Free radicals and antioxidants in normal physiological
functions and human disease. En: The International Journal of Biochemistry &
Cell Biology. 2007. Vol. 39, No. 1. p. 44-84.
38. WINKEL-SHIRLEY, B. Biosynthesis of flavonoids and effects of stress. En:
Current opinion in plant biology. 2002. Vol. 5, No. 3. p. 218-223.
39. GIL-IZQUIERDO, A. GIL, M. I. y FERRERES, F. Effect of Processing Techniques at Industrial Scale on Orange Juice Antioxidant and Beneficial Health
Compounds. En: Journal of agricultural and food chemistry. 2002. Vol. 50, No.
18. p. 5107-5114.
40. VALLEJO, F.; et al. Concentration and Solubility of Flavanones in Orange Beverages Affect Their Bioavailability in Humans. En: Journal of agricultural and
food chemistry. 2010. Vol. 58, No. 10. p. 6516-6524.

/ 342 /

Captulo 12 / Chapter 12

Aprovechamiento de los
subproductos citrcolas
Julin Londoo-Londoo*
Jelver Sierra**
Rafael lvarez***
Ana Mara Restrepo Duque****
Catarina Pedro Pssaro Carvalho*****

Resumen
*

Qumico Farmacutico. Doctor en Ciencias Qumicas. Docente de la Corporacin Universitaria Lasallista. Grupo de
nvestigacin en ngeniera de
Alimentos. Caldas, Antioquia
Colombia.
** Qumico Farmacutico. Magister en Biologa-Gentica.
Candidato Doctor en ngeniera de Materiales. Universidad de Antioquia. Grupo de nvestigacin en Sustancias Bioactivas. Medelln
-Colombia.
*** Qumico Farmacutico.Doctor en Ciencias Farmacuticas
y Alimentarias. Universidad
Federal de Santa Catarina.
Departamento de Ciencias
Farmacuticas. FlorianpolisBrasil.
**** ngeniera Qumica. Magister en Ciencia y Tecnologa
de Alimentos. Docente de
la Corporacin Universitaria
Lasallista. Grupo de nvestigacin en ngeniera de Alimentos. Caldas, Antioquia
Colombia.
*****ng. Agrnoma. Ph.D. en
ng. de Alimentos. Corporacin de nvestigacin Agropecuaria CORPOCA. C La
Selva. Rionegro, Antioquia
Colombia.

En este captulo se describen las principales sustancias


qumicas presentes en los residuos de la industrializacin de ctricos. Especialmente se detallan en los carotenoides, aceites fijos y esenciales, flavonoides, limonoides y pectina. Finalmente se relacionan aplicaciones
de estos componentes en los sectores pecuario, farmacutico, alimentario y ambiental.
Palabras clave: residuos, subproductos, industria citrcola
The use of citrus sub products
Abstract
This chapter describes the main chemical substances
contained by the waste generated in citrus industrialization. An especial emphasis is given for carotenoids, fixed and essential oils, flavonoids, limonoids and
pectin. Finally, applications of these components for
the livestock, pharmaceutical, alimentary and environmental sectors are also described.
Key words: waste, sub products, citrus industry
/ 343 /

Julin Londoo-Londoo, Jelver Sierra, Rafael lvarez, Ana Mara Restrepo Duque, Catarina Passaro

ntroduccin
A nivel mundial, la preocupacin acerca del aprovechamiento de residuos
ha tomado gran fuerza entre la comunidad cientfica y sobre todo a nivel industrial, en donde los procesos de transformacin generan desechos y subproductos que pueden ser tiles en otras actividades; sin embargo, los residuos
generados en las transformaciones agroindustriales no han sido aprovechados
eficientemente en Colombia, en parte, porque su valor es an desconocido.
Especficamente, el aprovechamiento industrial de los ctricos se ha convertido en una actividad intensiva en donde participan empresas dedicadas a
toda la cadena productiva (cultivadores, procesadoras, centros de distribucin
y exportadores), produciendo jugos, pulpas, concentrados y frutas en fresco;
pero a medida que la produccin crece, se aumenta tambin la generacin
de residuos slidos y lquidos, los cuales estn compuestos principalmente
de agua, azcares solubles, fibra, cidos orgnicos, aminocidos, minerales,
aceites esenciales, flavonoides y vitaminas, estando en cantidades diferentes
dependiendo de la fraccin de la fruta (jugo, cscara, pulpa, mesocarpio), su
estado de madurez y el sistema empleado para la extraccin del jugo1.

Subproductos de ctricos
Actualmente, se producen ms de 120 millones de toneladas de ctricos
en todo el mundo, de las cuales el 40% es utilizado por la agroindustria para
extraer cerca de la mitad del peso del fruto como zumo. El resto, la piel, las
semillas y la pulpa se convierten en residuos. As, tan solo en Espaa, las
cantidades de residuos ascienden a 600.000 toneladas por ao y en Florida (USA) a 5 millones de toneladas por ao. Por su parte, de acuerdo con
la produccin mundial de ctricos, se estima que en el mundo se estaran
produciendo alrededor de 20 millones de toneladas en residuos de ctricos2.
Los residuos de ctricos pueden clasificarse como lquidos slidos. Los
principales residuos lquidos identificados en el proceso de transformacin
de ctricos incluyen: los de la lnea de extraccin de jugo, los del lavado de
la cscara, y aquellos obtenidos en el proceso de centrifugacin en la lnea de
recuperacin de aceites esenciales. Por lo general son residuos de naturaleza
muy diluida o corresponden a una proporcin pequea del total de material
de desecho3, a excepcin de las melazas, las cuales corresponden a un lquido
obtenido por prensado de las cscaras y evaporado hasta obtener una fase
viscosa, de color marrn y con 72 Brix. La melaza de ctricos es similar a la
/ 344 /

Aprovechamiento de los subproductos citrcolas

melaza de caa, con cerca de 45% de azcares totales, sin embargo, tiene ms
protenas y un contenido de cenizas inferior.
Con relacin a los residuos slidos, la cscara constituye la principal fraccin
de residuos, representando alrededor del 50% del total del peso de la fruta. Adems, si se trata de frutas que han crecido en zonas tropicales, podra existir una
mayor produccin de residuos, toda vez que estas frutas tienden a presentar una
relacin ms alta de cscara/pulpa comparada con frutas subtropicales4.

Sustancias con inters industrial presentes en residuos de ctricos


La composicin qumica de los residuos de ctricos dependen de muchos factores como por ejemplo: la especie de ctrico, la fraccin de la fruta, el estado de madurez, la procedencia geogrfica y el sistema empleado para la extraccin del jugo.
Sin embargo, debido a que la composicin qumica de una fruta corresponde a
las caractersticas bioqumicas y fisiolgicas propias de la especie vegetal, as como a
la funcin que cumplen estas sustancias en la planta, haremos un anlisis de la composicin qumica de los residuos de ctricos de acuerdo con su ubicacin en la fruta.
En general, todos los ctricos tienen una estructura idntica, salvo cuando
se trata de dimensiones y forma. Por ejemplo, los limones son generalmente
ovalados con el eje central siguiendo el tallo; las mandarinas son aplastadas en
los polos con el eje central en el plano ecuatorial, mientras que la mayora de
las naranjas son redondas. En cuanto a las partes que constituyen el fruto estn:
epidermis, flavedo, albedo, endocarpio, septas, semillas y eje central (figura 1)

Figura 1. Representacin esquemtica de la distribucin


de la composicin qumica de un fruto ctrico.
/ 345 /

Julin Londoo-Londoo, Jelver Sierra, Rafael lvarez, Ana Mara Restrepo Duque, Catarina Passaro

Epidermis: La piel del fruto est constituida por una estructura epicuticular en forma de placas con clulas secretoras y esclerenquimticas donde
su funcin es proteger mecnicamente y limitar la transpiracin mediante
la exudacin de cera, cuya cantidad depende de la variedad, del clima y del
crecimiento de las frutas. Esta capa suele alojar una microflora constituida
principalmente por hongos y bacterias.
En general, alcanos, aldehdos y cidos grasos son los componentes principales de la cera epicuticular ctrica, mientras que los alcoholes primarios y
triterpenoides son constituyentes menores. Adems, se ha encontrado que el
contenido de esta cera se incrementa durante la maduracin del fruto alcanzando hasta 110 g/cm5.
Flavedo: Bajo la epidermis se encuentra el flavedo que aloja vesculas oleaginosas con paredes muy finas y frgiles. En el flavedo son importantes los
pigmentos y los aceites esenciales. Los pigmentos dan su color amarillo o
anaranjado a los frutos. Antes de madurar predomina el color verde de la clorofila, pero a medida que la fruta va madurando aparecen los caroteroides que
le confieren el color amarillo-naranja.
Carotenoides: El contenido global de carotenos es mayor en las naranjas, le siguen las mandarinas y es muy pequeo en las limas, limones
y toronjas. En las naranjas oscila de 30 a 300 mg/Kg de corteza fresca; en
las mandarinas de 80 a 140 mg/Kg y en los dems de 1 a 5 mg/Kg. En la
tabla 1 se muestra el contenido de carotenoides individuales en diferentes especies de ctricos y en la figura 2 se pueden apreciar sus estructuras
qumicas.
Tabla 1. Contenido de carotenoides (%) en cscaras
de diferentes especies ctricas6.
Carotenoide

Naranja

Mandarina

Clementina

Toronja

Limon

Neocromo

1.6

3.1

5.7

2.2

4.3

-citraurina

10.0

13.3

28.0

9.3

4.0

Luteoxantina

2.9

1.6

6.1

2.1

0.5

9Z-Violaxantina

33.8

18.0

7.9

6.4

1.6

Luteina

6.6

5.4

4.1

7.6

8.3

-criptoxantina

3.5

23.4

13.4

11.3

19.9

/ 346 /

Aprovechamiento de los subproductos citrcolas

Figura 2. Estructuras qumicas de los principales carotenoides presentes


en la cscara de algunas especies de ctricos. a) Neocromo, b) -citraurina,
c) Luteoxantina, d) 9Z-Violaxantina, e) Luteina, f) -criptoxantina.

Aceites esenciales: Los aceites esenciales son mezclas de varias sustancias


qumicas biosintetizadas por las plantas, que dan el aroma caracterstico a
algunas flores, rboles, frutos, hierbas, especias, semillas y a ciertos extractos
de origen animal. Se trata de productos qumicos intensamente aromticos,
no grasos, voltiles por naturaleza y livianos (poco densos). Son insolubles
en agua, levemente solubles en alcohol, grasas, ceras y aceites vegetales. En
gimnospermas y angiospermas es donde aparecen las principales especies que
contienen aceites esenciales, distribuyndose dentro de unas 60 familias. Son
particularmente ricas en esencias las pinceas, laurceas, mirtceas, labiceas,
umbelferas, asterceas y rutceas.
En cuanto al rendimiento del aceite obtenido de una planta, ste vara de
unas cuantas milsimas por ciento de peso vegetal hasta 0.1-3 %.
Caracterizacin qumica de aceites esenciales: De manera general, el
procedimiento para determinar la composicin qumica de los aceites esen/ 347 /

Julin Londoo-Londoo, Jelver Sierra, Rafael lvarez, Ana Mara Restrepo Duque, Catarina Passaro

ciales incluye una secuencia de etapas desde la preparacin de la muestra, la


extraccin y el anlisis.
La extraccin se puede realizar por hidrodestilacin en la cual las cascaras exprimidas se pesan en balanza electrnica y posteriormente se reducen de tamao,
este material se humecta con 1 litro de una solucin al 5% (p/v) de NaCl para
que durante el proceso se produzca un efecto salting-out y mejorar la liberacin
de los compuestos orgnicos voltiles, posteriormente las cascaras molidas se cargan en un hidrodestilador, de tal manera que formen un lecho fijo compactado.
Los equipos ms comunes de hidrodestilacin se muestran a continuacin:

Equipo para hidrodestilacin de aceites


esenciales de United States Pharmacopoeia, USP
32 NF27.

Equipo para hidrodestilacion de aceites


esenciales de British Pharmacopoeia 2007.

Figura 3. Equipos de hidrodestilacin propuestos por las Farmacopeas Britnica


y Farmacopea Norteamericana (USP) para la extraccin de aceites esenciales.

En el equipo de la USP el vapor de agua se genera en un baln de vidrio fondo plano, el cual contiene el material vegetal. Conforme el vapor se
expande por el recipiente las cascaras comienzan a liberar el aceite esencial
contenido en ellas, y a su vez, debido a su alta volatilidad se va evaporando.
Al ser soluble en el vapor circundante, es arrastrado, corriente arriba hacia
el tope del hidrodestilador. La mezcla, vapor saturado y aceite esencial, fluye
hacia un condensador, mediante un cuello de cisne o prolongacin curvada
/ 348 /

Aprovechamiento de los subproductos citrcolas

del conducto de salida del hidrodestilador. En el condensador, la mezcla se


condensa y enfra, hasta la temperatura ambiente. A la salida del condensador,
se obtiene una emulsin lquida inestable, la cual se separa en la parte distal
del equipo de destilacin. Al final del proceso se recogen cantidades del aceite
esencial, el cual es menos denso que el agua quedando suspendido en la parte
superior de la columna de agua y por otro lado se obtiene sustancias orgnicas
voltiles polares disueltas en estas aguas, las cuales se denominan aguas aromticas o aguas florales.
La composicin de los aceites esenciales de ctricos se puede establecer
por Cromatografa de Gases acoplada a Espectrometra de Masas (GC/MS),
generalmente con una columna capilar tipo HP5 y usando Helio como gas de
arrastre. La identificacin se realiza por comparacin del patrn de fragmentacin con libreras y reportes de la literatura.
Para asegurar la identidad y autenticidad de un producto de origen vegetal, tpicamente se realizan en forma conjunta la identificacin qumica e
identificacin botnica. La identificacin qumica aplica frecuentemente procedimientos cromatogrficos para la deteccin de un compuesto marcador
especificado por la literatura efectuando normalmente procedimientos de
comparacin de perfiles conocidos comnmente como fingerprint o huella
digital.
En la aplicacin de la identificacin botnica y de la informacin qumica
aparece el concepto quimiotaxonmico de cada especie. Para este propsito se
establecen compuestos marcadores que constituyen ndices de identificacin y
calidad. Como tal estas sustancias constituyen una expresin directa de la bioqumica de la planta. Aunque la composicin de un aceite puede cambiar con
la poca de la recoleccin, el lugar geogrfico o pequeos cambios genticos,
resulta necesario identificar las sustancias en los aceites esenciales de ctricos
que tienen relevancia analtica para establecerlos como marcadores tipificantes
de su procedencia, lo que se denomina como qumiomarcadores.
Las propiedades fsico-qumicas de los aceites esenciales son diversas,
puesto que este grupo engloba diferentes tipos de sustancias, de hecho existen ejemplos de lo heterogneo que puede ser la composicin de un aceite
en particular entre una especie y otra. Prcticamente puede encontrarse solo
un compuesto como en el caso del aceite esencial de gaulteria que corresponde en un 98-99 % a salicilato de metilo o como sucede con la esencia de
canela la cual contiene ms de 85 % de cinamaldehdo, por su parte existen
aceites esenciales de mediana complejidad como en el caso del jazmn y la
/ 349 /

Julin Londoo-Londoo, Jelver Sierra, Rafael lvarez, Ana Mara Restrepo Duque, Catarina Passaro

manzanilla donde se encuentran ms de 30 compuestos y finalmente los


aceites esenciales de ctricos son complejos y pueden contener alrededor de
80 compuestos. Algunos quimiomarcadores en aceites esenciales de ctricos
se muestran en la tabla 2.
Tabla 2. Quimiomarcadores de aceites esenciales de cascaras de mandarina.
Sustancia

Nmero CAS

Tiempo
de Retencin (Min)

Porcentaje
relativo
(%)

1R- -Pineno

7785-70-8

6.113

0.99

Sabineno

3387-41-5

6.671

0.23

-Pineno

127-91-3

6.870

3.78

-Fellandreno

99-83-2

7.101

0.23

3-Careno

13466-78-9

7.188

0.19

-Terpineno

99-86-5

7.272

0.43

Limoneno

138-86-3

7.492

51.74

D-Silvestreno

1461-27-4

7.514

8.47

-Terpineno

586-62-9

7.841

0.64

1-Octanol

111-87-5

7.926

0.29

- Terpinoleno

586-62-9

8.246

0.68

-Linalool

78-70-6

8.346

2.70

-Terpineol

138-7-4

8.984

0.37

L-4-terpineol

20126-76-5

9.429

1.76

-Terpineol

10482-56-1

9.615

27.28

(S)-cis-Verbenol

18881-04-4

9.914

0.22

Figura 4. Estructuras qumicas de los principales quimiomarcadores


presentes en el aceite esencial de mandarina. a) Limoneno, b) -Terpineol,
c) D-Silvestreno, d) -Pineno, e) -Linalool.
/ 350 /

Aprovechamiento de los subproductos citrcolas

Albedo: Despus del flavedo aparece el albedo compuesto por clulas de


estructura tubular que forman una tela con la mayora del volumen tisular
comprimido en el espacio intercelular. La espesura del albedo vara segn el
tipo de ctricos y de cultivo. El albedo es rico en flavonoides y pectina.
Flavonoides: Los flavonoides son constituyentes de amplia distribucin
en el reino vegetal, implcitamente se encuentran en todas las plantas, pero
su distribucin cuantitativa vara entre diferentes rganos y en diferentes
poblaciones de una misma planta, explicado por la regulacin de la expresin gentica y la interaccin con factores ambientales (clima, altitud,
nutricin y prcticas agrcolas)7.
Los flavonoides presentan una gran variedad estructural, con un esqueleto
comn de ncleo flavon (2fenilbenzopirano) que contiene dos anillos bencnicos (A) y (B) combinados por un anillo pirano (C) con oxgeno como heterotomo, donde las modificaciones sobre el anillo C generan una variedad
de tipos de flavonoides como se muestra en la figura 5. Estructuralmente, las
flavanonas tienen el anillo C saturado, mientras que las flavonas presentan
una insaturacin en los carbonos 23. Por su parte, las chalconas y dihidrochalconas tienen una estructura abierta, y desaparece virtualmente el anillo C.
En los ctricos, los flavonoides ms abundantes son aquellos pertenecientes a los grupos de las flavonas, flavanonas, chalconas y dihidrochalconas. Estos compuestos tienen una distribucin restringida, lo cual hace que
sean descritos como flavonoides minoritarios a pesar de estar presentes en
concentraciones significativas en algunos alimentos de alto consumo. Las
estructuras qumicas de los flavonoides ms representativos de ctricos se
muestran en la figura 6.
En cuanto a las modificaciones en los anillos A y B, la glicosilacin es
un fenmeno comn. En general, en los ctricos, las flavanonas se presentan como glicsidos, generalmente rutinsidos (1 6 ramnosil-glucsidos) y
neohesperidinsidos (1 6 ramnosil-glucsidos) unidos casi siempre por un
enlace O-glicsido al carbono 7 de la aglicona8.
Muchos cultivares comerciales de limn, lima, mandarina y naranja dulce han sido caracterizados qumicamente demostrando que poseen un patrn de flavonoides principalmente del tipo rutinsido (compuestos menos
amargos)9, mientras que naranja amarga y pomelo contienen principalmente
neohesperidinsidos (compuestos amargos). Por su parte, la toronja, por tratarse de un hbrido, presenta un perfil mezclado de rutinsidos y neohesperi/ 351 /

Julin Londoo-Londoo, Jelver Sierra, Rafael lvarez, Ana Mara Restrepo Duque, Catarina Passaro

dinsidos. Este hecho es importante, pues los perfiles cromatogrficos de los


flavonoides glicosilados en ctricos se han convertido en una herramienta til
para quimiotaxonoma de materiales hbridos y para el control de calidad y de
adulteraciones en productos derivados10.

Figura 5. Esquema de la clasificacin de los flavonoides basado


en las modificaciones estructurales en el anillo C, modificado
de Tiwari y colaboradores11.

Figura 6. Estructuras qumicas de los flavonoides ms frecuentes


encontrados en ctricos.
/ 352 /

Aprovechamiento de los subproductos citrcolas

Pectina: La pectina es un polmero del cido galacturnico cuya estructura


general es la siguiente:

Figura 7. Estructura qumica de la pectina

Cada anillo de la cadena posee un grupo carboxilo (-COOH). Este


grupo puede estar esterificado con metanol produciendo grupos ster
metlicos, (-COOCH3) o neutralizado por una base generando grupos
amida (-CONH2). Segn cuntos grupos carboxlicos estn esterificados
en la cadena o polmero, Kertesz los clasific dndole diferentes
nombres12:
t Protopectinas, si todos los carboxilos estn esterificados. Estas son insolubles en agua y se hallan en mayor cantidad en los tejidos de los frutos no
maduros o verdes.
t Acidos pectnicos: Si solo una parte pero mayoritaria de los carboxilos est
esterificada. Estos compuestos son capaces de formar geles si las condiciones de slidos solubles y pH son adecuadas. Las sales de estos cidos se
llaman pectinatos.
t Pectinas: Son los cidos pectnicos, solubles en agua caliente, con un contenido medio de ster metlico. La principal caracterstica es su capacidad
de formar geles en presencia de suficientes slidos solubles, cidos o iones
polivalentes.
t Acidos pcticos: Estos compuestos no poseen grupos carboxilicos esterificados. Las sales de estos se denominan pectatos y reaccionan fcilmente
/ 353 /

Julin Londoo-Londoo, Jelver Sierra, Rafael lvarez, Ana Mara Restrepo Duque, Catarina Passaro

con los iones calcio de las clulas para producir compuestos insolubles en
los jugos de frutas, dando un precipitado visible comnmente en la separacin de fases o abanderamiento en los nctares.
As, existen dos caractersticas qumicas fundamentales que definen
las propiedades de las pectinas. 1) grado de esterificacin, 2) longitud
de la cadena. El comportamiento y las aplicaciones prcticas de los diferentes tipos de pectinas se explican segn los valores de estas dos caractersticas.
Segn el grado de esterificacin, las pectinas se clasifican como de alto o
bajo metoxilo.
Las pectinas de bajo metoxilo (LMP, Low Methoxyl Pectins): presentan
esterificacin menor del 50% y gelifican solamente con presencia de iones
calcio. Algunas veces aparecen grupos amidados luego de los procesos industriales de desmetilacin en medio amoniacal.
Las pectinas de alto metoxilo (HMP, High Methoxyl Pectins): poseen
grupos carboxilo esterificados en ms del 50%. Este grado de esterificacin
determinar el comportamiento de las pectinas en la gelificacin, de tal manera que se requiere una concentracin mnima de slidos solubles y un valor
de pH que oscila en un rango relativamente estrecho.
El poder gelificante de la pectina se expresa en grados SAG. Estos grados se
definen como el nmero de gramos de sacarosa que en una solucin acuosa
de 65 Brix y un valor de pH 3,2, son gelificados por un gramo de pectina,
obtenindose un gel de una consistencia determinada12.
t Propiedades fisicoqumicas de las pectinas: La disolucin en agua de las
pectinas en polvo tiene lugar en tres etapas: Dispersin, hinchado y disolucin. Para la dispersin del polvo es necesaria una fuerte agitacin. Una
vez dispersada, la pectina necesita un tiempo (funcin de la temperatura,
de la concentracin, de la dureza del agua, etc.) para hidratarse en la etapa
conocida como hinchado. Finalmente cuando las molculas han fijado una
cantidad suficiente de agua, entre 15 y 25 veces su propio peso, se obtiene
una solucin homognea.
A temperatura ambiente y a su propio pH, (2,8-3,2) las pectinas son
mas solubles en agua cuanto mayor es su grado de esterificacin. Las disoluciones de pectina son estables en medio cido (pH: 2,5 a 4,5) incluso
a temperaturas elevada; por el contrario sufren una rpida degradacin en
medio alcalino
/ 354 /

Aprovechamiento de los subproductos citrcolas

La viscosidad de la solucin depende de:


t La concentracin y la temperatura,
t El peso molecular y el grado de esterificacin de la pectina,
t La presencia de electrolitos en el medio,
t La dureza del agua, especialmente en las pectinas de bajo metoxilo.
Las Pectinas de Alto Metoxilo (HM) pueden encontrarse
en el mercado de tres tipos:
Gelificacin de la pectina

Porcentaje esterificacin

Lenta

60 67

Mediana

68 70

Rpida

71 76

La gelificacin se entiende como el inicio de la formacin del gel en la temperatura crtica de gelificacin. Esta temperatura es caracterstica de cada pectina.
En cuanto a la pectina de bajo metoxilo, en solucin acuosa sus grupos
carboxilo se disocian parcialmente para formar iones carboxilo con carga
negativa (R-COO-), la adicin de azcar y de cido modifica completamente este cuadro. El azcar desarrolla una accin deshidratante sobre la
pectina y la lleva al lmite de la solubilidad; el cido, neutraliza los iones
carboxilos, reduce las repulsiones de cargas elctricas y la disociacin de
la pectina, y favorece las uniones fsicas de sus molculas, generando una
estructura reticular.
t Extraccin de pectinas: Se han reportado mltiples mtodos para la extraccin de polisacridos solubles como alginato, carragenanos y pectinas
a partir de material vegetal. La pectina es generalmente hidrolizada y extrada con agua acidificada (pH 1-3) a una temperatura entre 60 a 90C
por un tiempo que vara entre 30 minutos y varias horas. Generalmente la
extraccin se lleva a cabo en reactores con agitacin lenta seguida por separacin usando filtracin. El paso final de purificacin consiste en precipitar
y lavar las pectinas con alcohol, secar y pulverizar el precipitado13-15. Actualmente se han investigado otros mtodos alternativos para la extraccin
de pectina ctrica, entre ellos, el uso de membranas16, la extraccin asistida
por microondas17, la extraccin con agua subcrtica18,
/ 355 /

Julin Londoo-Londoo, Jelver Sierra, Rafael lvarez, Ana Mara Restrepo Duque, Catarina Passaro

Semilla
Las semillas de ctricos contienen cerca de 36% de aceite con caractersticas
deseables de un aceite comestible19. En cuanto a las sustancias con actividad
biolgica, se han encontrado antioxidantes en las semillas de naranja, limn
y toronja, adems de la presencia de limonoides con actividad insecticida y
antitumoral20, 21.
Aceite de semilla de ctricos
Despus de la extraccin del jugo, las semillas se separan de los residuos
con una paleta, se parten, se lavan, se secan, y el aceite se extrae por prensado,
usando en algunos casos un solvente de extraccin comercial con n-hexano o
ter de petrleo, para mejorar la recuperacin del aceite.

El aceite no refinado de semilla de ctricos es plido, de color amarillento y


puede tener un aroma suave o de almendra. Las caractersticas fsico-qumicas de
los aceites de semillas de ctricos, es decir, el ndice de refraccin, peso especfico,
punto de fusin, color y viscosidad, varan de acuerdo con la especie (tabla 3).
El aceite de semillas de ctricos se puede utilizar para cocinar despus de
refinacin. Sin embargo, los crudos se utilizan para la preparacin de detergentes y jabones19.
Tabla 3. Caractersticas fisicoqumicas del aceite de semilla de ctricos19.
PROPIEDAD

LIMON

NARANJA

MANDARINA

MEZCLA

Indice de refraccin
(25C)

1,46810.001

1,46840.002

1,46720.001

1,46820.001

Densidad (25C) (g/cm3)

0.8840.01

0.9140,06

0.9620.09

0.9100.08

Punto de fusion (C)

Viscosidad (10-1 Pa. s)

0.05

0.07

0.08

0.07

0.9530.08

0.6730.09

1.1200.09

0.7620.06

189.51.41

190.21.87

187.21.73

188.31.76

188.51.40

189.51.72

186.81.70

187.51.41

5.950.48

6.370.51

5.900.62

5.980.57

96.231.34

102.571.57

91.541.09

99.251.07

Valor cido
(mg KOH/g aceite)
Indice de saponificacin
(mg KOH/g aceite)
ndice ester
(mg KOH/g aceite)
ndice de peroxide
(mEq O2/Kg aceite)
ndice de yodo
(mg I/g aceite)

/ 356 /

Aprovechamiento de los subproductos citrcolas

En cuanto a la composicin qumica, el aceite crudo de semilla de ctricos


contiene, principalmente triglicridos, y en menor proporcin, cidos grasos
libres, diacilgliceroles, monoacilgliceroles, esteroles, fosfolpidos, alcoholes e
hidrocarburos.
El aceite de ctricos de semilla, como un aceite comestible potencial,
sirve como una buena fuente de cidos grasos esenciales. Ms de 60 cidos
grasos han sido encontrados en diversos aceites de semillas de ctricos, entre
los cuales los cidos grasos insaturados estn presentes en una gran cantidad
(> 65%), principalmente linoleico (> 30%), oleico (> 18%) y linolnico
(2-12%), adems de cantidades muy pequeas de cido mirstico (C14: 1).
Los cidos grasos saturados son menos abundantes que sus contrapartes no
saturados en los aceites de semillas de ctricos y consisten principalmente
de los cidos palmtico (C16: 0) y esterico (C18: 0) 22-31% y 1.6%, respectivamente22.
Limonoides
Los limonoides comprenden un grupo de triterpenos tetracclicos oxigenados que son ampliamente distribuidos en las plantas de las familias Rutaceae
y Meliaceae, muchos de ellos se encuentran libres (agliconas) o unidos a azcares (glicsidos), de hecho existen alrededor de 50 agliconas y 17 glicsidos
reportados hasta ahora, de las cuales cerca de 36 agliconas fueron aisladas de
plantas del gnero Citrus y gneros relacionados23.

Las agliconas son insolubles en agua y suelen ser responsables del sabor
amargo de los zumos de ctricos, a diferencia de los glicsidos que no presentan sabor y son solubles en agua. De hecho, la presencia de agliconas de
limonoides en concentraciones superiores a 6 ppm impiden el consumo de
los jugos de ctricos, pues contenidos superiores a 4 ppm clasifican el jugo de
ctricos de mala calidad, entre 4 y 2 ppm como aceptable y inferiores a 2 ppm
como de buena calidad. Este hecho obliga a reducir su contenido en el jugo a
travs de mezclas, dilucin u operaciones de remocin24.
Adems de su importancia econmica en la transformacin de los ctricos,
los limonoides tienen un amplio rango de actividades biolgicas, especialmente
su potencial efecto antitumoral. Los limonoides inhiben la tumorignesis qumicamente inducida en boca, estmago, intestino delgado, colon, pulmn, y piel
de animales de experimentacin. Adems inhiben la proliferacin de cncer de
mama in vitro. Especficamente Obacunone y limonina (figura 8), los limonoides ms conocidos de ctricos, inhiben la carcinognesis de colon en ratas25, 26.
/ 357 /

Julin Londoo-Londoo, Jelver Sierra, Rafael lvarez, Ana Mara Restrepo Duque, Catarina Passaro

Los limonoides son tambin activos como repelentes de insectos, adems


de inhibir su crecimiento y reproduccin23.

Figura 8. Estructuras qumicas de las principales agliconas


de limonoides presentes en ctricos.

Usos y aplicaciones de resiudos de ctricos


Recuperacin y aplicaciones de ingredientes bioactivos: Las frutas y vegetales contienen gran variedad de sustancias con actividad biolgica, de las cuales
las vitaminas (A, E y C), compuestos fenlicos, carotenoides, tocoferoles, cidos
orgnicos, fibra dietaria, entre otros, han sido ampliamente estudiados.
En la actualidad se acepta ampliamente que los efectos benficos de las frutas en la prevencin de enfermedades de alto impacto cmo aquellas de tipo
cardiovascular y ciertos tipos de cncer se deben a sus componentes bioactivos. Esto ha conducido a un aumento en la conciencia de los consumidores
acerca de los problemas de salud relacionados con la dieta y ha llevado a buscar alternativas para incorporar en la ingesta diaria algunos componentes que
puedan beneficiar la salud, lo cual ha promovido la aparicin en el mercado
de una amplia gama de productos entre los que se cuentan suplementos nutricionales, alimentos funcionales (nutracuticos) o frutas con un mayor contenido de metabolitos activos; adicionalmente existe un recelo por parte de
los consumidores frente a aditivos de origen sinttico y por ende la demanda
de colorantes, saborizantes y antioxidantes de origen natural ha aumentado
considerablemente en los ltimos aos27.
t Aplicaciones como aditivos en alimentos: Son mltiples las aplicaciones de
residuos de ctricos como aditivos en alimentos27, 28. Una de ellas consiste en
/ 358 /

Aprovechamiento de los subproductos citrcolas

someter los residuos ctricos, como las melasas, cscaras, concentrados de jugo
y pulpa a fermentacin, tratamiento pectoltico y extraccin con alcohol para
obtener un agente enturbiante para bebidas29. Por otro lado, son mltiples las
aplicaciones de residuos de ctricos en la industria crnica30. De hecho, se ha
estudiado el efecto de la adicin de diferentes concentraciones (5-10%) de las
aguas residuales de jugo de naranja y aceites esenciales de organo o tomillo
(0,02%), sobre las caractersticas qumicas, fsico-qumicas y sensoriales de
una mortadela, lo cual tiene un efecto significativo en la extensin de la vida
til debido a una reduccin del grado de oxidacin de los lpidos31.
t Cscara de ctricos como matriz alimentaria: La ingeniera de matrices
utiliza la tcnica de impregnacin al vaci como mecanismo de incorporacin de disoluciones suspensiones o emulsiones que contienen componentes fisiolgicamente activos sobre estructuras alimentaras porosas, como
es el caso de la corteza de los ctricos32. Este mecanismo representa una
alternativa muy efectiva en el desarrollo de nuevos ingredientes y alimentos
funcionales de humedad alta, intermedia y baja en estructuras porosas y
con excelentes cualidades organolpticas, microbiolgicas y nutricionales,
que permiten satisfacer las necesidades del consumidor actual que cada vez
mas est buscando en el mercado alimentos que le proporcionen beneficios
a la salud que van ms all de los nutrientes tradicionales que ste contiene.
Adems es importante resaltar que este tipo de desarrollos no se encuentran en el mercado.
t Aplicaciones farmacuticas: El inters farmacutico de los compuestos
presentes en los residuos de ctricos se basa en el uso de estos materiales en
medicina tradicional33 y la descripcin reciente de sus propiedades farmacolgicas34, 35.
Las aplicaciones teraputicas de los flavonoides obtenidos de cscara de
ctricos son ya conocidas y utilizadas a nivel clnico. La mezcla micronizada de
flavonoides Dafln, que contiene 90 % de diosmina y 10 % de hesperidina
es utilizada como un potente medicamento flebotnico para el tratamiento
de la insuficiencia venosa crnica36. Adems, son numerosos los productos
fitoteraputicos y alimentos funcionales comercializados a nivel mundial que
contienen, totalmente o como parte de sus principios activos, una fraccin
flavonoide, comnmente llamada bioflavonoides e incluso denominada genricamente cmo vitamina P.
Es tan promisoria la obtencin de compuestos con alto valor a partir de
residuos de ctricos, que en el estado de la Florida (USA), una regin produc/ 359 /

Julin Londoo-Londoo, Jelver Sierra, Rafael lvarez, Ana Mara Restrepo Duque, Catarina Passaro

tora de ctricos, ha surgido el Laboratorio de Investigacin en Ctricos y Productos Subtropicales (Citrus and Subtropical Products Research Laboratory,
por su nombre en ingls) precisamente con el inters de recuperar, a partir de
residuos de ctricos, productos importantes para uso en la salud humana y en
alimentos. Ellos han estimado que el aprovechamiento de los residuos generados por la industria procesadora de ctricos en los Estados Unidos de Amrica,
podra suministrar ms de 10.000 toneladas de hesperidina por ao, muy por
debajo de la demanda mundial para esta materia prima37.
Por otro lado, los suplementos dietticos obtenidos de la cscara de naranja, tambin conocida como naranja amarga, verde, naranja agria, zhi shi; son
cada vez ms populares como ingrediente en productos para perder peso38.
Las cscaras de ctricos contienen aminas adrenrgicas, principalmente sinefrina, tiramina y octopamine. La sinefrina se conoce como un componente
activo de plantas y suplementos alimenticios utilizados en la prdida de peso.
Se convirti en uno de los estimulantes ms populares presentes en los productos para bajar de peso despus de que la Alimentacin de Medicamentos
y Alimentos (FDA) de EE.UU haba prohibido el uso de suplementos dietticos que contienen efedrina39.
Produccin de alimentos para animales: El aumento de los costos de disposicin de residuos ha aumentado el inters en la utilizacin de los subproductos ctricos como alimentos alternativos para animales, especialmente pulpa de ctricos frescos, ensilado de ctricos, pulpa seca, harina de cscaras de
ctricos y melazas de ctricos, los cuales se pueden utilizar como una fuente
de alta energa en raciones de animales durante ceba y lactancia, con menos
efectos negativos sobre la fermentacin ruminal que los alimentos ricos en
almidn. Sin embargo, con niveles muy altos de algunos residuos ctricos
puede ocurrir paraqueratosis ruminal, sobre todo cuando el nivel de forraje
en la dieta es baja40, 41.
Las aplicaciones son mltiples e incluyen la suplementacin con 20% de
pulpa seca de ctricos sobre la produccin, composicin de la leche, consumo
de materia seca, condicin corporal, metabolitos y electrolitos sanguneos de
vacas lecheras, encontrando una mayor produccin de leche, con mayor contenido graso y un aumento en el colesterol srico42.
Adicionalmente, se ha investigado sobre las posibilidades y limitaciones
del reemplazo parcial de granos de cereales con pulpa de citrus seca en las
dietas de corderos de engorde, evaluando sus efectos sobre el crecimiento
/ 360 /

Aprovechamiento de los subproductos citrcolas

del animal y la calidad de la carne, encontrando que la sustitucin de cereales con la pulpa de ctricos puede ser econmicamente beneficiosa en
las dietas de los corderos de engorde, cuando la sustitucin en la mezcla de
concentrado se encuentra en un porcentaje equivalente al 30%. En cambio,
cuando la pulpa de ctricos se usa a niveles de 45%, lleva a una disminucin en la eficiencia de conversin alimenticia, peso en canal, rendimiento
y densidad de la canal43.
Por otro lado, la pulpa de ctricos ensilada se ha evaluado como una alternativa de alimento en dietas para cerdos en crecimiento, en trminos de rendimiento del crecimiento, flora intestinal y calidad de la carne, encontrando
que los cerdos pueden adaptar su aparato digestivo a la pulpa de ctricos como
fuente carbohidratos de alta fermentacin, sin efectos perjudiciales sobre el
crecimiento econmico y la calidad de la carne, adems de los beneficios potenciales sobre la microbiologa intestinal44.
En otros trabajos, se ha evaluado en cabras el efecto de la suplementacin
con diferentes niveles de cscaras de ctricos sobre la digestibilidad y el consumo de paja de cebada tratada con urea e hidrxido de sodio. Mostrando que
una suplementacin con subproductos ctricos de 100 g/dia mejora la digestibilidad y el consumo de la paja de cebada. Sin embargo, los niveles ms altos
de complemento disminuyen la utilizacin digestiva de la dieta45.
En otros pequeos rumiantes, como ovejas, se ha estudiado la inclusin
frutos de ctricos enteros sobre la evolucin de los parmetros ruminales in
vivo (pH, cidos grasos voltiles (AGV) y Nitrgeno amoniacal), intentando
reemplazar el grano de trigo y comparando con pulpa ctrica en el mismo nivel de inclusin. Los resultados muestran que los carbohidratos de ctricos son
altamente degradables y se podra utilizar como una alternativa al almidn de
cereales para cubrir las necesidades energticas de las ovejas, y no parece suponer un riesgo, ya que incluso, se mantuvo un pH ruminal ms alto durante
todo el da46 47.
Aplicaciones de la pectina ctrica: La fibra diettica abarca una gran variedad de macromolculas, mostrando una amplia gama de propiedades fsicoqumicas. En los ctricos, los componentes qumicos de la fibra son: pectina,
lignina, celulosa y hemicelulosa. De hecho, la pectina ctrica tiene mejor calidad que otras fuentes de fibra diettica debido a la presencia de compuestos
bioactivos asociados (flavonoides y vitamina C) con propiedades antioxidantes, que pueden ejercer efectos biolgicos benficos2.
/ 361 /

Julin Londoo-Londoo, Jelver Sierra, Rafael lvarez, Ana Mara Restrepo Duque, Catarina Passaro

Las aplicaciones de la pectina ctrica son mltiples y comprenden desde


el uso en alimentos como estabilizante de emulsiones48 y fuente de fibra
dietaria49-52, as como usos ms recientes en qumica ambiental para la remocin
de contaminantes como metales pesados53-57, azul de metileno58 y colorantes59.
Biocombustibles: Los residuos de ctricos contienen carbohidratos solubles e insolubles, siendo una materia prima ideal para la conversin biolgica a biocombustibles como el etanol y el biogs. Sin embargo, adems de
los carbohidratos, los residuos de ctricos contienen aceites esenciales, cuyo
componente principal es D-limoneno, que es extremadamente txico para la
actividad biolgica y debe ser eliminado antes de la fermentacin o procesos
de digestin anaerobia60. Varios estudios se han reportado para la obtencin
de biocombustibles a partir de residuos de ctricos61-63 El proceso propuesto
para la obtencin de biocombustibles a partir de residuos de ctricos consiste
en la mezcla de los residuos con cido sulfrico diluido y luego una exposicin
a vapor para hidrolizar los polisacricos y evaporar el limoneno. La mezcla
resultante se centrifuga, donde la parte lquida es fermentada en etanol y se
destila. La vinaza de la destilacin y los slidos de la centrfuga se mezclan
y se digiere en biogs (metano). El biogs puede ser utilizado en parte para
producir vapor necesario para el proceso64.

Conclusiones
t Las aplicaciones de los residuos de ctricos trascienden el mbito agroalimentario y van desde las aplicaciones convencionales en alimentos, farmacia y agricultura, hasta usos ambientales y en energa. De all la importancia, cada vez mayor, de generar procesos ambientalmente amigables que
permitan aplicaciones comercialmente tiles.
t La obtencin de sustancias de inters comercial a partir de residuos de ctricos implica, no solo el desarrollo de una metodologa de extraccin limpia y con alto rendimiento, sino tambin el desarrollo de procedimientos
analticos que permitan la valoracin de las sustancias obtenidas.
t Los volmenes de residuos generados en las etapas de produccin de ctricos, justifican su aprovechamiento. Sin embargo, es necesario implementar
procesos que sean econmicamente viables y tcnicamente factibles a escala industrial para responder a las operaciones de almacenamiento, transporte y transformacin.
/ 362 /

Aprovechamiento de los subproductos citrcolas

Referencias bibliogrficas
1. BRADDOCK, R. J. By-products of citrus fruits. En: Food Technology. Vol. 49,
No. (1995); p. 74-77.
2. MARN, F. R.; et al. By-products from different citrus processes as a source of
customized functional fibres. En: Food Chemistry. Vol. 100, No. 2 (2007); p.
736-741.
3. COLL, M. D.; et al. Recovery of flavanones from wastes of industrially processed lemons. En: Zeitschrift fr Lebensmitteluntersuchung und -Forschung A.
Vol. 206, No. 6 (1998); p. 404-407.
4. SCHIEBER, A.; STINTZING, F. C. and CARLE, R. By-products of plant
food processing as a source of functional compounds - recent developments. En:
Trends in Food Science and Technology. Vol. 12, No. 11 (2001); p. 401-413.
5. SALA, J. M.; LAFUENTE, T. and CUAT, P. Content and chemical composition of epicuticular wax of Navelina Oranges and Satsuma Mandarins as Related to Rindstaining of Fruit. En: Journal of the Science of Food and Agriculture.
Vol. 59, No. 4 (1992); p. 489-495.
6. AGCS, A.; et al. Comparative study on the carotenoid composition of the peel
and the pulp of different citrus species. En: Innovative Food Science & Emerging Technologies. Vol. 8, No. 3 (2007); p. 390-394.
7. WINKEL-SHIRLEY, B. Biosynthesis of flavonoids and effects of stress. En: Current opinion in plant biology. Vol. 5, No. 3 (2002); p.218-223.
8. TOMS-BARBERN, F. and MICHAEL, N. C. Flavanones, chalcones and
dihydrochalcones - nature, occurrence and dietary burden. En: Journal of the
Science of Food and Agriculture. Vol. 80, No. 7 (2000); p. 1073-1080.
9. ROUSEFF, R. L.; MARTIN, S. F. and YOUTSEY, C. O. Quantitative survey
of narirutin, naringin, hesperidin, and neohesperidin in citrus. En: Journal of
Agricultural and Food Chemistry. Vol. 35, No. 6 (2002); p. 1027-1030.
10. ROBARDS, K. and ANTOLOVICH, M. Analytical Chemistry of Fruit Bioflavonoids: A Review. En: Analyst. Vol. 122, No. (1997); p. 11-34.
11. TIWARI, A. Imbalance in antioxidant defence human diseases: Multiple approach of natural antioxidant therapy. En: Current Science. Vol. 81, No. 9
(2001); p. 1179-1187.
12. KERTESZ, Z. I. The Pectic Substances. NY: Interscience Publishers, Inc., 1951.
13. YEOH, S.; SHI, J. and LANGRISH, TAG. Comparisons between different techniques for water-based extraction of pectin from orange peels. En: Desalination. Vol. 218, No. 1-3 (2008); p. 229-237.
/ 363 /

Julin Londoo-Londoo, Jelver Sierra, Rafael lvarez, Ana Mara Restrepo Duque, Catarina Passaro

14. LIU, Y.; SHI, J. and LANGRISH, TAG. Water-based extraction of pectin from
flavedo and albedo of orange peels. En: Chemical Engineering Journal. Vol. 120,
No. 3 (2006); p. 203-209.
15. YAPO, B. M. Pectin quantity, composition and physicochemical behaviour as
influenced by the purification process. En: Food Research International. Vol. 42,
No. 8 (2009); p. 1197-1202.
16. MORESI, M. and SEBASTIANI, I. Pectin recovery from model solutions using
a laboratory-scale ceramic tubular UF membrane module. En: Journal of Membrane Science. Vol. 322, No. 2 (2008); p. 349-359.
17. KRATCHANOVA, M.; PAVLOVA, E. and PANCHEV, I. The effect of microwave heating of fresh orange peels on the fruit tissue and quality of extracted
pectin. En: Carbohydrate Polymers. Vol. 56, No. 2 (2004); p. 181-185.
18. TANAKA M.; et al. Extraction of dietary fiber from Citrus junos peel with
subcritical water. En: Food and Bioproducts Processing. Vol. In Press, Corrected
Proof, No. (2011).
19. SHAHIDI, F. Baileys Industrial Oil and Fat Products. 6th Ed. John Wiley &
Sons, 2005. Volumes 1-6.
20. HERNNDEZ-MONTOYA, V.; MONTES-MORN, M. A. and ELIZALDE-GONZLEZ MP. Study of the thermal degradation of citrus seeds. En:
Biomass and Bioenergy. Vol. 33, No. 9 (2009); p. 1295-1299.
21. DANDEKAR, D. V.; JAYAPRAKASHA, G. K. and PATIL, B. S. Hydrotropic
extraction of bioactive limonin from sour orange (Citrus aurantium L.) seeds.
En: Food Chemistry. Vol. 109, No. 3 (2008); p. 515-520.
22. SAIDANI, M.; DHIFI, W. and MARZOUK, B. Lipid evaluation of some Tunisian citrus seeds. En: Journal of Food Lipids. Vol. 11, No. 3 (2004); p. 242-250.
23. MANNERS, G. D. Citrus Limonoids: Analysis, Bioactivity, and Biomedical
Prospects. En: Journal of Agricultural and Food Chemistry. Vol. 55, No. 21
(2007); p. 8285-8294.
24. MANNERS, G. D.; et al. Analysis of Bitter Limonoids in Citrus Juices by Atmospheric Pressure Chemical Ionization and Electrospray Ionization Liquid
Chromatography-Mass Spectrometry. En: Journal of Agricultural and Food
Chemistry. Vol. 51, No. 13 (2003); p. 3709-3714.
25. CHAMPAGNE, D. E.; et al. Biological activity of limonoids from the rutales.
En: Phytochemistry. Vol. 31, No. 2 (1992); p. 377-394.
26. CHIDAMBAR, A.; et al. Obacunone and obacunone glucoside inhibit human
colon cancer (SW480) cells by the induction of apoptosis. En: Food and Chemical Toxicology. Vol. 49, No. 7 (2011); p. 1616-1625.
/ 364 /

Aprovechamiento de los subproductos citrcolas

27. ZIA, U. R. Citrus peel extract - A natural source of antioxidant. En: Food Chemistry. Vol. 99, No. 3 (2006); p. 450-454.
28. KANG, H. J.; et al. Studies on the development of functional powder from citrus peel. En: Bioresource Technology. Vol. 97, No. 4 (2006); p. 614-620.
29. SREENATH, H. K.; CRANDALL, P. G. and BAKER, R. A. Utilization of
citrus by-products and wastes as beverage clouding agents. En: Journal of Fermentation and Bioengineering. Vol. 80, No. 2 (1995); p. 190-194.
30. FERNNDEZ-LPEZ, J.; et al. Application of functional citrus by-products
to meat products. En: Trends in Food Science & Technology. Vol. 15, No. 3-4
(2004); p. 176-185.
31. VIUDA-MARTOS, M.; et al. Effect of adding citrus waste water, thyme and
oregano essential oil on the chemical, physical and sensory characteristics of a
bologna sausage. En: Innovative Food Science & Emerging Technologies. Vol.
10, No. 4 (2009); p. 655-660.
32. CHFER, M.; et al. Microstructure and vacuum impregnation response of citrus peels. En: Food Research International. Vol. 36, No. 1 (2003); p. 35-41.
33. ARIAS, B. A. and RAMN-LACA, L. Pharmacological properties of citrus and
their ancient and medieval uses in the Mediterranean region. En: Journal of
Ethnopharmacology. Vol. 97, No. 1 (2005); p. 89-95.
34. GONZLEZ-MOLINA, E.; et al. Natural bioactive compounds of Citrus limon for food and health. En: Journal of Pharmaceutical and Biomedical Analysis. Vol. 51, No. 2 (2010); p. 327-345.
35. BENAVENTE-GARCA, O. and CASTILLO, J. Update on uses and properties
of citrus flavonoids: new findings in anticancer, cardiovascular, and anti-inflammatory activity. En: Journal of agricultural and food chemistry. Vol. 56, No. 15
(2008); p. 6185-6205.
36. LYSENG-WILLIAMSON, K. A. and PERRY, C. M. Micronised purified flavonoid fraction: a review of its use in chronic venous insufficiency, venous ulcers
and haemorrhoids. En: Drugs. Vol. 63, No. 1 (2003); p. 71-100.
37. GROHMANN, K.; MANTHEY, J. A. and CAMERON, RG. Acid-catalyzed
hydrolysis of hesperidin at elevated temperatures. En: Carbohydrate Research.
Vol. 328, No. 2 (2000); p. 141-146.
38. ROSSATO, L. G.; et al. Synephrine: From trace concentrations to massive consumption in weight-loss. En: Food and Chemical Toxicology. Vol. 49, No. 1 (2011); p. 8-16.
39. GRAY, S. and WOOLF, A. D. Citrus aurantium used for weight loss by an adolescent with anorexia nervosa. En: Journal of Adolescent Health. Vol. 37, No. 5
(2005); p. 414-415.
/ 365 /

Julin Londoo-Londoo, Jelver Sierra, Rafael lvarez, Ana Mara Restrepo Duque, Catarina Passaro

40. BAMPIDIS, V. A. and ROBINSON, P. H. Citrus by-products as ruminant


feeds: A review. En: Animal Feed Science and Technology. Vol. 128, No. 3-4
(2006); p. 175-217.
41. TRIPODO, M. M.; et al. Citrus waste recovery: a new environmentally friendly
procedure to obtain animal feed. En: Bioresource Technology. Vol. 91, No. 2
(2004); p. 111-115.
42. BELIBASAKIS, N. G. and TSIRGOGIANNI, D. Effects of dried citrus pulp
on milk yield, milk composition and blood components of dairy cows. En: Animal Feed Science and Technology. Vol. 60, No. 1-2 (1996); p. 87-92.
43. CAPARRA, P.; et al. Solar-dried citrus pulp as an alternative energy source in
lamb diets: Effects on growth and carcass and meat quality. En: Small Ruminant
Research. Vol. 68, No. 3 (2007); p. 303-311.
44. CERISUELO, A.; et al. The inclusion of ensiled citrus pulp in diets for growing
pigs: Effects on voluntary intake, growth performance, gut microbiology and
meat quality. En: Livestock Science. Vol. 134, No. 1-3 (2010); p. 180-182.
45. MADRID, J.; et al. Effects of citrus by-product supplementation on the intake
and digestibility of urea+sodium hydroxide-treated barley straw in goats. En:
Small Ruminant Research. Vol. 28, No. 3 (1998); p. 241-248.
46. PIQUER, O.; et al. Whole citrus fruits as an alternative to wheat grain or citrus
pulp in sheep diet: Effect on the evolution of ruminal parameters. En: Small
Ruminant Research. Vol. 83, No. 1-3 (2009); p. 14-21.
47. VOLANIS, M.; et al. Utilization of an ensiled citrus pulp mixture in the feeding of lactating dairy ewes. En: Small Ruminant Research. Vol. 64, No. 1-2 (2006); p. 190-195.
48. LEROUX, J.; et al. Emulsion stabilizing properties of pectin. En: Food Hydrocolloids. Vol. 17, No. 4 (2003); p. 455-462.
49. FIGUEROLA, F.; et al. Fibre concentrates from apple pomace and citrus peel as
potential fibre sources for food enrichment. En: Food Chemistry. Vol. 91, No.
3 (2005); p. 395-401.
50. GARAU, M. C.; et al. Effect of air-drying temperature on physico-chemical properties of dietary fibre and antioxidant capacity of orange (Citrus aurantium v. Canoneta) by-products. En: Food Chemistry. Vol. 104, No. 3 (2007); p. 1014-1024.
51. LARIO, Y.; SENDRA, E. and GARCA-PREZ, J. et al. Preparation of high
dietary fiber powder from lemon juice by-products. En: Innovative Food Science
& Emerging Technologies. Vol. 5, No. 1 (2004); p. 113-117.
52. MESBAHI, G.; JAMALIAN, J. and FARAHNAKY, A. A comparative study
on functional properties of beet and citrus pectins in food systems. En: Food
Hydrocolloids. Vol. 19, No. 4 (2005); p. 731-738.
/ 366 /

Aprovechamiento de los subproductos citrcolas

53. SCHIEWER, S. and BALARIA, A. Biosorption of Pb2+ by original and protonated citrus peels: Equilibrium, kinetics, and mechanism. En: Chemical Engineering Journal. Vol. 146, No. 2 (2009); p. 211-219.
54. SCHIEWER, S. and IQBAL, M. The role of pectin in Cd binding by orange
peel biosorbents: A comparison of peels, depectinated peels and pectic acid. En:
Journal of Hazardous Materials. Vol. 177, No. 1-3 (2010); p. 899-907.
55. SCHIEWER, S. and PATIL, S. B. Pectin-rich fruit wastes as biosorbents for
heavy metal removal: Equilibrium and kinetics. En: Bioresource Technology.
Vol. 99, No. 6 (2008); p. 1896-1903.
56. WAI, W. W.; ALKARKHI, A. F. and EASA, A. M. Comparing biosorbent ability of modified citrus and durian rind pectin. En: Carbohydrate Polymers. Vol.
79, No. 3 (2010); p. 584-589.
57. BALARIA, A. and SCHIEWER, S. Assessment of biosorption mechanism for
Pb binding by citrus pectin. En: Separation and Purification Technology. Vol.
63, No. 3 (2008); p. 577-581.
58. DUTTA, S.; et al. Application of Response Surface Methodology for preparation of low-cost adsorbent from citrus fruit peel and for removal of Methylene
Blue. En: Desalination. Vol. 275, No. 1-3 (2011); p. 26-36.
59. HAMEED, B. H.; MAHMOUD, D. K. and AHMAD, A. L. Sorption of basic
dye from aqueous solution by pomelo (Citrus grandis) peel in a batch system.
En: Colloids and Surfaces A: Physicochemical and Engineering Aspects. Vol.
316, No. 1-3 (2008); p. 78-84.
60. WILKINS, M. R. Effect of orange peel oil on ethanol production by Zymomonas mobilis. En: Biomass and Bioenergy. Vol. 33, No. 3 (2009); p. 538-541.
61. OBEROI, H. S; et al. Enhanced ethanol production from Kinnow mandarin
(Citrus reticulata) waste via a statistically optimized simultaneous saccharification and fermentation process. En: Bioresource Technology. Vol. 102, No. 2
(2011); p. 1593-1601.
62. POURBAFRANI, M.; et al. Production of biofuels, limonene and pectin from citrus wastes. En: Bioresource Technology. Vol. 101, No. 11 (2010); p. 4246-4250.
63. WILKINS, M. R.; WIDMER, W. W. and GROHMANN, K. Simultaneous
saccharification and fermentation of citrus peel waste by Saccharomyces cerevisiae to produce ethanol. En: Process Biochemistry. Vol. 42, No. 12 (2007); p.
1614-1619.
64. LOHRASBI, M.; et al. Process design and economic analysis of a citrus waste
biorefinery with biofuels and limonene as products. En: Bioresource Technology. Vol. 101, No. 19 (2010); p. 7382-7388.
/ 367 /

Ctricos: Cultivo, Poscosecha e Industrializacin


Serie Lasallista Investigacin y Ciencia
Se termin de imprimir en la
Editorial Artes y Letras S.A.S., en abril de 2012.

También podría gustarte