Lecturas de Tercer Grado de Primaria
Lecturas de Tercer Grado de Primaria
Lecturas de Tercer Grado de Primaria
El Manchas
Javi es un nio que
tiene un perro que se
llama El Manchas. En la
parte de la historia que
vamos a leer hoy, el nio
y
el
perro
estn
separados.
Javi se siente como si
se hubiera quedado
manco, cojo, sin su
sombra. As era como se
senta sin su perro El
Manchas. Era cierto que
el nuevo pas era bueno y ms saber dos idiomas, pero estar sin El
Manchas, era como estar sin su alma.
Por su parte, El Manchas tena como dueo a alguien que
pretenda ser su amigo y quien se vea buena persona; an as, El
Manchas, que estaba en un buen lugar, al menos con un espacio ms
grande que el que tena con Javi, extraaba de la misma forma a su
antiguo dueo.
Y como Javi no resisti ms tiempo la ausencia de su amigo El
Manchas, decidi romper el cochino [su alcanca] para poder ir en
busca de l. Saba que su madre se preocupara al no encontrarlo en
casa, pero el regao vala la pena.
Javi sac las monedas y venciendo sus miedos de salir solo, tom
el autobs y despus de tanto buscar y sudar por los nervios de andar
solo en la ciudad, encontr la direccin. Al tocar la puerta le abri una
seora que al verle el aspecto tan cansado, le invit una limonada, pero
del perro no deca nada. Despus de una gran insistencia por parte de
Javi, la seora le dijo que, en efecto, su hijo haba tenido al perro,
pero que lo haba vendido.
La tortuga Pocaprisa
La tortuga Pocaprisa tiene su modo de andar: camina un poco y se para
a ver el viento pasar. La tortuga Pocaprisa tiene su modo de andar:
si descansa, no camina, y el viento la
deja atrs.
La tortuga Pocaprisa tiene su modo de
andar: pasan las nubes corriendo, y el
tiempo las deja atrs. Tiene el nio su
sonrisa tiene sus olas el mar: la
tortuga Pocaprisa tiene su modo de
andar.
Cada uno de nosotros tiene su modo de andar, se han fijado? Cada
quien trate de describir cul es su modo de andar.
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Floria Jimnez, La tortuga pocaprisa en Ana Garraln
(antologadora), Si ves un monte de espumas y otros poemas. Antologa
de poesa infantil hispanoamericana, Mxico, SEP-Anaya, 2002.
Lectura con 96 palabras.
Anibal y Melquiades
Melquades era el nio ms fuerte y ms temido de la escuela. Poda cargar el
escritorio de la maestra con todo y maestra arriba; era capaz de pelear solo
contra dos de tercero, mataba los alacranes
con la mano y poda comerse una lata
completa de chile. Una vez dej la marca de
su poderoso puo en una puerta y un da
rompi con la frente el pizarrn. Hasta el
maestro de deportes le tena miedo, pues
de vez en cuando Melquades le pona un
azotador en la bolsa de su saco.
En cambio Anbal era el nio ms
dbil y flacucho de la escuela. Chupaba los
dulces porque no tena fuerza para
morderlos, le costaba trabajo partir un
cartoncillo en dos, daba las gracias cuando
alguien le robaba su comida en el recreo y
lloraba cuando sus compaeros le decan de
broma Anbal canbal. Muchas veces, su mam tena que cargarle la mochila
porque l se cansaba antes de llegar a la escuela. Una noche se cay de la cama
y, como ya no tuvo fuerzas para levantarse, prefiri dormir en el suelo...
El ltimo viernes de cada mes, el director de Dos ms dos menos dos
igual a dos organiz un torneo en el que tenan que concursar todos los
alumnos de la escuela. Cuando el director anunci el concurso de mayo fue para
Anbal un da feliz: habra un torneo de circo. Al llegar a su casa tom el
telfono y marc el nmero de Merln-ln. Estaba seguro de que l lo ayudara.
Voy a ensearte el mayor de mis secretos le dijo el mago cuando Anbal
termin de platicarle sobre el concurso. Nadie habr en el mundo que pueda
ganarte.
Cundo?
pregunt
Anbal
ansioso.
El sbado en la noche.
No se mueren de ganas de saber qu pasar? Ojal, en las lecturas de
los das que vienen, encontremos qu sucedi. Los impacientes vamos a buscar
el libro para enterarnos.
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Francisco Hinojosa, Anbal y Melquiades. Mxico, SEP-FCE, 1996.
Lectura con 323 palabras.
!Culguenme
Vamos a leer una pgina de un diario que
lleva un gato: un cuaderno o una libreta
donde este animalito acostumbra, todos o
casi todos los das, escribir lo que le
sucede, lo que se le ocurre, lo que ve. Es
una costumbre muy conveniente. Parece
difcil, pero si alguno comienza, aunque
sea con frases muy cortitas, ya ver lo
til,
lo
interesante
que
es.
Un lunes Est bien, est bien.
Culguenme. Mat a un pjaro. Por todos
los cielos, soy un gato. Mi trabajo,
prcticamente, es andar sigiloso [sin
hacer ruido] por el jardn tras los dulces
pajaritos que apenas pueden volar de un
seto a otro. Entonces, qu se supone que
debo hacer cuando una de esas pelotitas
emplumadas revoloteantes casi se arroja en mi boca? Me pudo haber golpeado.
Est bien, est bien. Le di un zarpazo. Es esa una razn para que Eli llorara
tan copiosamente sobre mi pelambre que casi me ahoga, y me apretara tan
fuerte que casi me asfixia?
Ay, Tufy! dijo ella, toda llorosa, ojos enrojecidos y motones de pauelos
mojados. Ay, Tufy!, cmo pudiste hacer eso?
Cmo pude hacer eso? Soy un gato. Cmo iba a saber que se hara tanto lo: la
madre de Eli corriendo apurada por peridicos viejos, y el padre de Eli llenando
una cubeta con agua jabonosa.
Bueno, bueno, tal vez no deb llevarlo adentro y dejarlo en la alfombra. Y es
probable que las manchas no se quiten nunca. As que: culguenme, soy un gato.
As son los gatos, verdad? Si cazan un ratn, una lagartija, un pjaro, se lo
llevan a sus amos, muy orgullosos de lo que hicieron.
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Anne Fine, Culguenme! en El diario de un gato asesino. Damin Ortega, ilus.
Mxico, SEP-FCE, 1999.
De qu colores somos?
El ao pasado fui de excursin con muchos nios. Mi primo Ral era
uno de los instructores. En el autobs
conoc a Kaelo. Nos sentamos juntas y
enseguida nos hicimos amigas. Kaelo
tiene diez aos, el pelo negro y la piel
color chocolate. Es espaola. Los nios
del asiento de atrs dijeron que
parecamos caf con leche. Y tenan
razn, porque Kaelo es oscura como el
caf y yo, blanca como la leche. Me
qued un momento pensando y entonces
le pregunt a mi primo Ral:
Por qu somos de diferentes colores?
Sabes, Marta? Esta pregunta vamos a contestarla entre todos me
explic.
Celebremos nuestra llegada con un juego! dijo Ral Voy a hacer una
pregunta, y la contestamos a la noche junto a la fogata. La mejor
respuesta tendr un premio. La pregunta es: por qu somos de
diferentes colores? Despus de la cena, nos sentamos alrededor del
fuego y Ral comenz a hablar:
En la maana hice una pregunta dijo. Quin quiere contestarla?
Se levantaron un montn de manos. Hubo muchas respuestas,
divertidas, ingeniosas, sorprendentes, pero ninguna nos dej
satisfechos. Entonces Ral tom la palabra:
No creo que mi respuesta sea ms hermosa dijo, ni ms
interesante, ni ms divertida que las dems. Pero es la ms real. El
color de la piel depende de la melanina. Cuanta ms melanina tenga una
persona, ms oscura ser. La melanina es una sustancia qumica que
protege la piel de las radiaciones ultravioletas, que estn en los rayos
del sol. Es como la sombrilla de nuestro cuerpo. Todos estbamos
atentos, y Ral sigui explicando:
La biblioteca imaginaria.
Hay un libro que habla solo,
un libro que nadie ha escrito,
un
libro
con
un
espejo
y, dentro, un libro distinto. Hay un
libro de aventuras donde nunca
pasa nada, un libro que inventa
cuentos con una sola palabra.
Hay un libro que se abre
con la llave de un castillo, un libro
para perderse en medio de un laberinto. Hay un libro donde el viento
arrastra todas las letras, un libro con un camino por donde nadie
regresa.
Libros que lo dicen todo y libros que se lo callan, libros donde el mar
va y viene sin salirse de la pgina.
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Juan C. Martn, La biblioteca imaginaria en Las palabras que se lleva
el viento. Mxico, SEP-Everest, 2004.
Lectura con 103 palabras.
Niito, ven.
Niito,
ven;
puras
y
bellas
van las estrellas a salir.
Y cuando salen las estrellas, los nios
buenos, a dormir!
Niito, ven; tras de la loma la Luna
blanca va a asomar.
Cuando
la
Luna
blanca
asoma,
los nios buenos, a soar!
Niito, ven; ya los ganados estn
mugiendo en el corral.
Cierra tus ojos fatigados en el regazo
maternal.
Niito, ven; suea en las rosas que el
viento agita en su vaivn.
Suea en las blancas mariposas... Niito, ven! Niito, ven!
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Amado Nervo, Niito ven en Ana Garraln (antologadora), Si ves un
monte de espumas y otros poemas. Antologa de poesa infantil
hispanoamericana, Mxico, SEP-Anaya, 2002.
Lectura con 82 palabras.
Trabalengero I.
Andamos
hoy
medio
adormilados? A ver si nos
despiertan estos trabalenguas.
Los vamos leyendo, y a ver si
podemos repetirlos.
Compr pocas copas, pocas copas
compr; y como compr pocas
copas, pocas copas compr.
La pcara pjara pica la tpica
jcara; la tpica jcara pica la
pcara pjara.
Rosa Rizo reza en ruso, en ruso reza Rosa Rizo.
Rosa Rosales cort una rosa.
Que roja la rosa de Rosa Rosales.
pregunt.
La
pobre
anciana,
al
verlo,
se
asust
pensando ste me come de un bocado! Y, claro, no se haba
equivocado:
se
convirti
la
abuela
en
su
alimento
en menos tiempo del que aqu te cuento.
Lo malo es que era flaca y tan huesuda que al lobo no le fue de gran
ayuda: Sigo teniendo un hambre aterradora... Tendr que
merendarme otra seora!!
Y, al no encontrar ninguna en la nevera, gru con impaciencia aqulla
fiera: Esperar sentado hasta que vuelva Caperucita Roja de la
Selva!
que as llamaba al bosque aquella fiera, aunque en la sierra estuviera
Y para que no se viere su fiereza, se disfraz de abuela con presteza,
se dio laca en las uas y en el pelo, se puso la gran falda gris de vuelo,
zapatos, sombrerito, una chaqueta y se sent en espera de la nieta.
Lleg por fin Caperucita a medio da y dijo: Cmo ests, abuela ma?
Por cierto, me impresionan tus orejas! Para mejor orte, que las
viejas somos un poco sordas. Abuelita, que ojos tan grandes tienes!
Claro, hijita, son los nuevos lentes que me he puesto para que pueda
verte, con Ernesto el oculista, dijo el animal mirndola con gesto
angelical mientras que se le ocurra que la chica iba a saberle mil veces
ms rica que el rancho precedente. De repente Caperucita dijo: Qu
imponente abrigo de piel llevas este invierno!
El lobo, estupefacto, dijo: Un cuerno! O no sabes el cuento o t
mientes:
Ahora te toca hablarme de mis dientes!
Me ests tomando el pelo...? Oye mocosa, te comer ahora mismo y a
otra cosa. Pero ella se sent en una silla, sac una pistola de la capa,
con calma apunt bien a la cabeza pam! all cay la buena pieza.
Al poco tiempo vi a Caperucita cruzando por el Bosque... Pobrecita!
Saben lo que llevaba la infeliz? Pues nada menos que un traje que a m
me pareci de piel de un lobo que estuvo una maana hacindose el
bobo.
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Roald Dahl, Caperucita roja y el lobo en Cuentos en verso para nios
perversos. Mxico, SEP-Altea, 2002.
Lectura con 390 palabras.
El delfn.
Bienvenido!
La cra del delfn nace
dentro del agua. Lo
primero que sale del
vientre de su madre es
la cola. En cuanto nace,
inmediatamente, otro
delfn hembra lo lleva
hasta la superficie
para
que
respire.
Dentro de poco, la cra
ya es muy grande, pero
no tardar mucho en
ser del tamao de su madre. La cra delfn no se separa de su madre
hasta los cuatro o seis aos. La cra mama la leche de su madre sin
perder una sola gota. En muy poco tiempo y con la ayuda de su madre,
aprende a nadar. Quince aos despus. Un da, cuando el delfn ya es
casi adulto, tiene que separarse de su madre. Ya est preparado para
vivir solo. Al principio se queda con otros delfines jvenes.
La vida del delfn, a la de quines se le parece?
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Lectura con 141 palabras.