Comunion Reparadora de Los Cinco Primeros Sabados

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COMUNIN

REPARADORA DE
LOS CINCO
PRIMEROS
SBADOS DE MES
"Mira, hija ma, mi
Corazn cercado de
espinas
que
los
hombres
ingratos
me clavan sin cesar
con blasfemias e
ingratitudes. T, al
menos,
procura
consolarme
HISTORIA DE LA DEVOCIN AL
INMACULADO CORAZN DE
MARA

La historia de la devocin del Inmaculado


Corazn se inicia en el siglo XVII, como
consecuencia del movimiento espiritual
que proceda de San Juan Eudes.

Previo a las apariciones de


la Virgen Mara, en Ftima,
en la primavera de 1916, el
ngel de la Paz de
Portugal, postrado en tierra,
en actitud de adoracin,
tocando con su frente el
suelo, pide a Jacinta,
Francisco y Luca hagan
esta Oracin de Desagravio, repitindola
tres veces seguidas: Dios mo, yo creo,
adoro, espero y te amo. Te pido perdn
por los que no creen, no adoran, no
esperan y no te aman. Y agreg: Oren
as, los Corazones de Jess y de Mara
estn atentos a la voz de sus splicas..

El 10 de diciembre de
1925, Luca era postulante
en el Convento de las
Doroteas en Pontevedra,
Espaa, cuando tiene una
aparicin de la Virgen sobre
una nube de luz, con el Nio
Jess a su lado. La
Santsima Virgen puso su
mano sobre el hombro de Luca, mientras en
la otra sostena su corazn rodeado de
espinas. El Nio Jess le dijo: "Ten
compasin del Corazn de tu Santsima
Madre. Est cercado de las espinas que
los hombres ingratos le clavan a cada
momento, y no hay nadie que haga un
acto de reparacin para sacrselas."

Un
ao
despus,
la
Santsima
Virgen
Mara
se
aparece,
en Ftima,
a
estos
tres
pastorcitos, Jacinta, Francisco y Luca, a
partir del 13 de Mayo de 1917. En la
tercera aparicin, el 13 de Julio, la
Santsima Virgen Mara les dej ver el
infierno y agreg: Han visto el infierno,
donde van a parar las almas de los
pobres pecadores. Para salvarlos quiere
el Seor establecer en el mundo la
devocin de mi Corazn Inmaculado. Si
los hombres hacen lo que yo les dir,
muchas almas se salvarn y habr paz...

Inmediatamente dijo Nuestra Seora a


Luca: "Mira, hija ma, mi Corazn
cercado de espinas que los hombres
ingratos me clavan sin cesar con
blasfemias e ingratitudes. Tu, al
menos, procura consolarme y di que a
todos los que, durante cinco meses,
en el primer sbado,

He venido a pedir la consagracin del


mundo a mi corazn Inmaculado y la
Comunin reparadora de los primeros
sbados de cada mes

- se confiesen,
- reciban en la Santa Misa la Sagrada
Comunin,
- recen el Rosario, y
- me hagan compaa durante 15
minutos meditando en los misterios
del rosario, todo esto con el fin de
desagraviarme,
les prometo asistirlos en la
hora de la muerte con las
gracias necesarias para su
salvacin"

En un dilogo entre Luca y Jacinta, ella,


de diez aos, dijo a Luca: "A m me
queda poco tiempo para ir al Cielo, pero
t te vas a quedar aqu abajo para dar a
conocer al mundo que nuestro Seor
desea que se establezca en el mundo la
devocin al Corazn Inmaculado de
Mara".
"Diles a todos que pidan esta gracia por
medio de ella y que el Corazn de
Jess desea ser venerado juntamente
con el Corazn de su Madre. Inssteles
en que pidan la paz por medio del
Inmaculado Corazn de Mara, pues el
Seor ha puesto en sus manos la paz del
mundo."
Despus de haber estado Luca en
oracin, Nuestro Seor le revel la
razn de los 5 sbados de
reparacin:
"Hija ma, la razn es sencilla: se trata de
5 clases de ofensas y blasfemias
proferidas contra el Inmaculado Corazn
de Mara:
Blasfemias contra
1.- Su Inmaculada Concepcin.
2.- Su virginidad.
3.- Su Maternidad Divina, rehusando al
mismo tiempo recibirla como Madre
de los Hombres.
4.- Los que procuran pblicamente
infundir en los corazones de los nios

la indiferencia, el desprecio y hasta el


odio hacia la Madre Inmaculada.
5.- Los que la ultrajan directamente en
sus sagradas imgenes.
"He aqu hija ma, porqu ante este
Inmaculado Corazn ultrajado, se movi
mi misericordia a pedir esta pequea
reparacin, y, en atencin a Ella, a
conceder el perdn a las almas que
tuvieran la desgracia de ofender a mi
Madre. En cuanto a ti procura
incesantemente con tus oraciones y
sacrificios moverme a misericordia para
con esas almas".
Sobre la Confesin
El 15 de febrero de 1926, se le aparece el
Nio Jess y le pregunta si haba
propagado la devocin a su Santsima
Madre.
Le pregunt Luca si vala la confesin
dentro de los ocho das anteriores al
sbado, a lo cual respondi Jess: S,
puede ser de muchos ms das, con tal
que, cuando me reciban, estn en gracia y
tengan la intencin de desagraviar el
Inmaculado Corazn de Mara.
Tambin le pregunt Luca qu ocurra si
alguien se olvidaba de poner la intencin.
Jess respondi: Pueden ponerla en la
confesin siguiente, aprovechando la
primera ocasin que tengan para
confesarse.
El 13 de septiembre de 1939 el obispo de
Leira conceda la aprobacin oficial de
esta devocin
Al consagrarnos al corazn
de Mara, descubrimos el
camino seguro al Sagrado
Corazn de Jess, smbolo
del amor misericordioso de
nuestro salvador.
(S.S. Juan Pablo II, 22 de Sept. De 1986)

ORACION DE CONSAGRACION AL
INMACULADO CORAZON DE MARIA
Bienaventurada Mara, Virgen de Ftima,
con renovada gratitud por tu presencia
materna unimos nuestra voz a la de
todas las generaciones que te llaman
bienaventurada.
Celebramos en ti las grandes obras de
Dios, que nunca se cansa de inclinarse
con misericordia sobre la humanidad
afligida por el mal y herida por el pecado,
para sanarla y salvarla.
Acoge con benevolencia de madre el
acto por el que nos ponemos hoy bajo tu
proteccin con confianza, ante esta tu
imagen tan querida por todos nosotros.
Estamos seguros que cada uno de
nosotros es precioso a tus ojos y que
nada te es ajeno de todo lo que habita en
nuestros corazones. Nos dejamos
alcanzar por tu dulcsima mirada y
recibimos la caricia consoladora de tu
sonrisa.
Protege nuestra vida entre tus brazos:
bendice y refuerza cada deseo de bien;
reaviva y alimenta la fe; sostn e ilumina
la esperanza; suscita y anima la caridad;
guanos a todos nosotros en el camino
de la santidad.
Ensanos
tu
mismo
amor
de
predileccin hacia los pequeos y los
pobres, hacia los excluidos y los que
sufren, por los pecadores y por los que
tienen el corazn perdido: rene a todos
bajo tu proteccin y a todos entrgales a
tu Hijo dilecto, el Seor Nuestro, Jess.
Amn.

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