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2. Guas para el entendimiento
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Hay unas ciertas guas que cada uno debemos seguir respecto a la Palabra
de Dios. Les garantizo que si ustedes siguen estas guas, gozarn de mucha
bendicin en sus corazones y vidas. Ciertamente deben de haber estas
guas en el estudio de la Palabra. Hoy en da un frasco de remedio por lo
simple que sea, un tnico o algo para un resfro, lleva sus indicaciones.
Cualquiera cosita que se compre en una de esas tiendas Todo a Real lleva
instrucciones para su empleo. Si es que las cosas de este mundo han de
llevar indicaciones para su uso, ciertamente la Palabra importantsima de
Dios debe de llevar unas guas para el estudio de ella. Quisiera mencionar 7
declaraciones muy sencillas que a la vez son fundamentales y preliminares,
las cuales servirn de guas para el estudio de las Escrituras.
1.
2.
Lea la Biblia,
3.
Estudie la Biblia,
4.
Medite en la Biblia,
5.
6.
Obedezca la Biblia,
7.
Particpela a otros.
Bien pueden aadir otras ms a la lista pero yo creo que estas son las
fundamentales y principales. Alguien lo ha dicho en una manera muy breve
y persuasiva: La Biblia aprndela de memoria; gurdela en su corazn;
mustrala por su vida; simbrala en el mundo. Esa es la manera de
expresar algo que presentaremos aqu.
1.
Por esta causa tambin yo, habiendo odo de vuestra fe en el Seor Jess, y
de vuestro amor para con todos los santos, no ceso de dar gracias por
vosotros, haciendo memoria de vosotros en mis oraciones:
No ven, que la oracin de Pablo es que tengan una sabidura y entendimiento de la revelacin del conocimiento de l, y la revelacin est aqu
en el libro. Deseaba que conocieran la Palabra de Dios; deseaba que sus
ojos y entendimiento fueran alumbrados. Quera que supieran algo de la
esperanza del llamamiento que tenan en Cristo. Esta es la oracin del
apstol Pablo, y si alguien se acuerda de m en la oracin, esta es la oracin
que quiero que eleve que mis ojos espirituales sean abiertos. Me gustara
recordar a ustedes en oracin as. Creo que la cosa ms importante para
ustedes y para m hoy da es saber la voluntad de Dios, y la voluntad de
Dios es la Palabra de Dios. No nos es posible conocer la Palabra de Dios a
menos que el Espritu de Dios sea nuestro Maestro. Eso es lo que dice Pablo
en su primera epstola a los corintios:
Porque quin de los hombres sabe las cosas del hombre, sino el Espritu del
hombre que est en l? As tampoco nadie conoci las cosas de Cristo, sino
el Espritu de Dios. (I a Corintios 2:11).
noche. Cubra toda la fealdad con una manta blanca y bella. Me sentaba en
mi estudio en el piso de arriba admirando la vista cuando me fij en que uno
de los ancianos de la iglesia que viva al lado, sali al porche llevando dos
cubos para carbn llenos de cenizas, las cuales el anciano iba a descargar
en el fondo. Lo vi detenerse un momento para mirar la vista, y yo
simplemente me sonrea porque saba como se senta l exactamente
como yo me senta al mirar la nieve que haba cado durante la noche. Pero
al avanzar l, se resbal. No queriendo esparcir las cenizas, aguant los
cubos a un lado y dio contra la escalinata y se golpe duro. No poda
aguantar yo la risa. Supongo que si an se hubiera desnucado, me habra
redo. Me fij en que mir a su alrededor y al estar satisfecho de que ninguno lo hubiera visto, se levant con gran satisfaccin y empez su caminito de nuevo. A medio camino, volvi a caerse y esta vez se golpe an
ms duro cayendo hasta la calzada. Esta vez mir de veras a su alrededor.
No ven, que no quera que alguien viera lo que le haba sucedido. Y yo saba
cmo se senta l. Pues, me sentira igual. El anciano se levant de nuevo; y
lleg al fondo y descarg las cenizas. Al regresar al porche mir la vista de
nuevo. No creo que esta vez fuera para admirar la vista sino para
asegurarse de que ninguno lo hubiera visto caer. No dije ni una palabrita
hasta el domingo en la maana. Cuando entr en la iglesia, fui por donde
estaba sentado l, me inclinaba y le dije, Tu s te veas muy cmico ayer
llevando las cenizas. Me mir pasmadamente y me dijo, Me veas Le
contest que s. Pues, me deca, Yo crea que ninguno me vio. Y luego le
dije, Yo pensaba eso. Yo saba exactamente cmo t te sentas. No ven,
que l tiene un espritu humano y yo tambin tengo un espritu humano, y
nos entendemos. No creo que haya tanta brecha entre generaciones en
ninguna parte, porque creo que los seres humanos nos entendemos. Mas,
quin es capaz de entender a Dios? El Espritu de Dios. Por eso es preciso
que el Espritu de Dios nos ensee, acomodando lo espiritual a lo espiritual.
An tengo muchas cosas que deciros, pero ahora no las podis sobrellevar.
Pero cuando venga el Espritu de verdad, l os guiar a toda la verdad;
porque no hablar por su propia cuenta, sino que hablar todo lo que oyere,
y os har saber las cosas que habrn de venir. El me glorificar; porque
tomar de lo mo, y os lo har saber. Todo lo que tiene el Padre es mo; por
eso dije que tomar de lo mo, y os lo har saber. Todava un poco, y no me
veris; porque voy al Padre. (Juan 16:12-16).
No ven, que el Seor Jess nos dice qu hemos de pedir. Tiene muchas
cosas para nosotros y quiere revelarnos estas cosas por medio del Espritu
Santo. De nuevo, en el captulo 14 de Juan, Cristo dice:
Esta, pues, es la primera gua: Empiece con oracin, y pida que el Espritu
de Dios sea su Maestro.
2.
LEA LA BIBLIA
Este es un pasaje muy notable de las Escrituras. No ven, que estas personas
haban estado en la cautividad babilnica por unos setenta aos; muchos de
ellos nunca haban odo la Palabra de Dios. No se circulaba mucho en aquel
entonces, y no haba tantas versiones distintas que se publicaban, ni hubo
en preparacin las de ser publicadas. Es probable que hubiera una sola, o
tal vez dos copias en existencia, y Esdras tena una de ellas. Se par y ley
delante de la puerta de Las Aguas.
Hay tantas distracciones hoy que nos quitaran del estudio de la Palabra de
Dios. Una de las distracciones ms grandes es la iglesia misma. La iglesia se
compone de comits, organizaciones, banquetes y diversiones, y proyectos
de fomento hasta el punto que ni an trata de la Palabra de Dios en muchas
iglesias hoy da. Hay iglesias que han eliminado de un todo el servicio de
predicacin. En su lugar ofrecen una hora en que las personas se expresan,
y se dicen lo que opinan. No considero ninguna cosa ser ms infantil, ni ms
prdida de tiempo que aquello. Yo lo creo ser ms bien una buena excusa de
un predicador perezoso, el cual no leer ni estudiar la Biblia, y as evita su
deber de predicar. Veo que hay tantos miembros de iglesias que son
desconocedores de la Biblia. Simplemente no conocen la Palabra de Dios.
Hace aos que la ensean en la iglesia corriente. Nos falta leer la Biblia, y
hay que profundizarla de veras. No es suficiente leer slo unos versculos
favoritos. Hay que leer toda la Palabra de Dios. Ese es el nico mtodo de
conocerla, mis amigos, y es el mtodo de Dios.
3.
ESTUDIE LA BIBLIA
Hace aos alguien se acerc al Doctor Morgan y le dijo, Usted habla como
si fuera inspirado. El Doctor Morgan le respondi, La inspiracin est
4.
MEDITE EN LA BIBLIA
Esta es una declaracin admirable la que el Seor nos ha dado. Les dijo que
escribieran la Palabra de Dios en todas partes para que quedara grabada en
sus corazones y vidas. En otras palabras, a dondequiera que vieran les era
como mirar las vallas anunciadoras. No se puede pasear por nuestras calles
y carreteras sin ver las vallas anunciadoras que hacen publicidad de las
bebidas alcohlicas y los cigarrillos. Ahora se puede comprender porqu las
personas hoy en da toman tanto licor, y porqu fuman cigarrillos. Es porque
queda delante de su vista todo el tiempo. El Seor conoci la naturaleza
humana. Nos conoce, y le mand a Su pueblo poner la Palabra donde la
veran. Estaba en sus postes, en sus puertas, la llevaron en los vestidos, y
eran de hablar de ella cuando caminaban, cuando se sentaban, y cuando se
acostaban. Dios exigi que Su pueblo meditara en la Palabra.
ello pues, no lo entenda. Lo lea una y otras veces por unas semanas y
meses, y por fin, una nueva luz le sali de aquel libro. Ahora, cuando yo
enseo el Cantar de los Cantares, por lo general doy la interpretacin de l
por dos razones: satisface la mente y el corazn mo ms que cualquiera
interpretacin que haya odo yo, y tambin s que el hombre que dio esa
interpretacin pasaba mucho tiempo en la meditacin del libro.
Hay los que nos escriben diciendo que la esposa escucha nuestro estudio
bblico por radio en el hogar, y que el esposo lo escucha en el trabajo. En la
hora de la cena los dos discuten lo que se enseaba de la Biblia ese da. Esa
es la meditacin. Es repasarla repetidas veces.
Ustedes recordarn que aquel eunuco etope que lea en Isaas mientras que
iba por el camino. Realmente estaba estudiando Isaas porque haba llegado
a una porcin que no entenda, y tuvo dificultad con ella. Como no saba lo
que significaba, la volvi a leer muchas veces. Aqu est un hombre, pues,
el cual est leyendo y estudiando, y el Espritu de Dios le abrir la Palabra
de Dios. Por eso, el Espritu gui a Felipe al etope para explicarle el captulo.
Le abri un mundo nuevo y l1eg a conocer a Cristo. La narracin dice que
sigui gozoso. Qu era lo que le hizo regocijar? Estaba meditando, mis
amigos. Reflexionaba sobre el captulo 53 de Isaas. Jams han meditado
ustedes en aquel Cordero que fue llevado como oveja al matadero? Quin
era? Baj a la tierra y se identific con nosotros, los cuales nos descarriamos
como ovejas, cada cual se apart por su camino. Y Jehov carg en l el
pecado de todos nosotros. Con cunta frecuencia meditan sobre estas
cosas? Bueno, el etope s meditaba. Siempre ha sido una cuestin de
especulacin en cuanto a lo que hizo el etope despus de confiar en Cristo.
La tradicin dice que regres a su tierra y fund la iglesia cptica de Etiopa.
Eso bien pueda ser, pero no sabemos si es verdad, o no. Lo interesante es
que sigui gozoso, y eso nos hace saber que estaba meditando en la Palabra
de Dios.
5.
Reconozco que esta gula pueda ser algo peligrosa porque tantas personas
dependen simplemente de lo que han dicho otros acerca de la Biblia. Hay
tantos libros que han salido hoy en da, los cuales dan mala enseanza
tocante a la Palabra de Dios. Hay que comprobar todo lo que se escribe por
medio de la Biblia misma.
Ahora, todo maestro y predicador del Evangelio tiene una coleccin de libros
que estudia y que son de mucha importancia. Alguien preguntar, debo
repetir palabra por palabra el texto que otro ha escrito? No, eso nunca se
debe hacer a menos que nombre la obra que se copia. Pero, s tiene el
derecho de usar lo que otros han escrito. Me han dicho que unos de los
mensajes mos son predicados por otros, y a veces no reconocen al autor de
ninguna manera. En cuanto a m, no me importa pero s revela el carcter
del individuo que hace uso de una materia ajena citndola palabra por
palabra, y no la reconoce. Un profesor en el seminario resolvi este
problema de la manera siguiente. Cuando le pregunt si debiera citar a
otros escritores, o no, le deca, Usted debe pacer en los pastos de todos,
pero debe dar su propia leche. Y eso quiere decir que han de leer lo que
otros han escrito, pero es esencial que lo mediten bien para expresarlo del
modo suyo. S, tienen el derecho de hacer eso. Lo importante es que debemos aprovecharnos del estudio de otros hombres sobre la Palabra de Dios.
6.
OBEDEZCA LA BIBLIA
Pero que ha sido manifestado ahora, y que por las Escrituras de los profetas,
segn el mandamiento del Dios eterno, se ha dado a conocer a todas las
gentes para que obedezcan a la fe.
Para que obedezcan a la fe. Esto es donde se desviaron Adn y Eva. Ella
no slo escuchaba a Satans, el enemigo de Dios, sino tambin desobedeci
a Dios.
7.
PARTICIPELA A OTROS
No slo lean la Biblia; no slo mediten en ella; no slo lean lo que otros han
escrito acerca de ella, sino tambin particpenla a otros. Eso es lo que
debemos hacer. Creo que llegarn a un punto de saturacin en el estudio de
la Palabra a menos que la participen a otros. Dios, por alguna razn, no les
dejar retirarse de los hombres y llegar a ser un tipo de enciclopedia bblica
ambulante, sabindola toda mientras los dems quedamos ignorantes. Es
por esa razn que declar:
Dios nos ha mandado a ser testigos. Dijo, Y me seris testigos. No dijo que
hayamos de ser eruditos, ni enciclopedias ambulantes, ni libros de memoria.
Hemos sido llamados a ser testigos hoy en da, y por lo tanto debemos de
participar la Palabra a otros.
Mi amigo, particpela.
Estas, luego, son las siete guas bsicas que debemos seguir al tomar en las
manos la Palabra de Dios:
1.
2.
Lea la Biblia,
3.
Estudie la Biblia,
4.
Medite en la Biblia,
5.
6.
Obedezca la Biblia,
7.
Particpela a otros.
1. Introduccin
2. Entendimiento
3. Intrprete
4. Mtodos
5. En General
6. Histrico
7. Especiales
8. Poesa
9. Lenguaje
10. Smiles
11. Parbolas
12. Alegoras
13. Proverbios
14. Tipos
15. Smbolos
16. Acciones
17. Sueos
18. Profeca
19. Mesinica
20. Apocalpticos
21. Apocalpsis
22. Doble Sentido
23. Citas Bblicas
24. Acomodamiento
25. Discrepancias
26. Armona
27. Analoga
28. Prctico