La Justificación Del Estado Mínimo de Robert Nozick RESUMEN
La Justificación Del Estado Mínimo de Robert Nozick RESUMEN
La Justificación Del Estado Mínimo de Robert Nozick RESUMEN
Murray Rothbard
Hecha esta aclaracin, que me parece de suma importancia, debo decir que
creo que al planteamiento de Nozick pueden hacrsele varias objeciones. La
mejor refutacin que conozco es, precisamente, la de Murray Rothbard[viii].
Es la mejor porque combate a Nozick en sus propios trminos, estando de
acuerdo con l en el inicio del proceso, pero discrepando en su desarrollo. Para
Rothbard, firme en sus convicciones anarquistas, la evolucin del estado de
naturaleza anarquista hasta el Estado mnimo no es consistente porque, en
primer lugar, no se ha dado en la historia de la humanidad nada ni
remotamente parecido al proceso descrito por Nozick. Esto es extensible a
cualquier teora contractualista, sea la de Locke, la de Rousseau o
cualquiera otra. Su principal refutacin est en que, histricamente, nunca se
ha dado ese supuesto contrato social. Adems, dice Rothbard, para ser
consecuente, Nozick debera hacerse anarquista y esperar a que, de manera
espontnea, surgiera ese Estado mnimo del que habla. Efectivamente, si
ningn estado actual ha surgido por el proceso descrito por Nozick, y todos los
Estados actuales son ms extensos que el Estado mnimo (de modo que
ninguno de ellos es legtimo, segn la teora del propio Nozick), debera abogar
por su desaparicin, para que pudieran ser reemplazados por el Estado
mnimo. La crtica de Rothbard me parece impecable.
Asimismo, y aunque todava no estoy seguro de la validez de esta crtica,
cabra aadir que Nozick ha cado en un error de tipo epistemolgico.
Los rdenes espontneos, como el mercado, o, en nuestro caso, el
surgimiento del Estado mnimo, son procesos a los que afecta una
consustancial indeterminacin epistmica. Es decir, son procesos sobre los
cuales no podemos realizar predicciones detalladas, lo que obedece a dos
razones. La primera es que el sujeto de tales procesos es el ser humano,
dotado, por esencia, de libre albedro. En segundo lugar, se da la
circunstancia de que, aun prescindiendo de la libertad humana, para poder
efectuar predicciones detalladas, en el contexto de un orden espontneo, se
necesitara poseer una cantidad de informacin que ninguna mente humana
posee, y que, si se poseyera, hara innecesarios tales procesos. En palabras
de Pedro Schwartz: Nos resistimos a aceptar la incertidumbre
epistmica de todo mercado libre. Por epistmico quiero significar que es del
todo imposible predecir las actividades futuras en una economa libre. Por
su propia naturaleza, un mercado libre no tiene meta ni se puede pretender
que llegue a una determinada meta productiva[ix]. Ello, por supuesto, no
significa que no pueda llegar a hacerse ningn tipo de prediccin, pero s que
stas han de tomarse con precaucin, y que tales predicciones no sern muy
detalladas (en economa, sern cualitativas y no cuantitativas, lo
que Hayek denomina pattern predictions) Esto es coherente con la visin
de la economa (que es extensible al resto de rdenes espontneos) de
la Escuela Austraca. Siguiendo el paradigma austraco, podemos llegar a
cuestionar la capacidad de Nozick de predecir, con el detalle que lo hace, el
proceso que llevar de la anarqua al Estado mnimo. En otras palabras, bien
pudiera ser que el proceso descrito por Nozick sucediera en realidad de manera
muy distinta a como l propone, debido precisamente a la informacin que no
ha podido tomar en consideracin. Si pudiramos conocer con exactitud cmo
va a evolucionar el mercado, el mismo proceso de mercado sera innecesario,
bastara un burcrata que asignara los recursos segn el mercado los iba a
distribuir, y as nos ahorraramos todo el proceso y la prdida de tiempo y
recursos que conlleva. Del mismo modo, si supiramos cmo va a evolucionar
un grupo social con exactitud, bastara un dictador o un ingeniero social que
llevara a la sociedad a ese estado final de la historia. El principal argumento a
favor de un mercado y una sociedad libres, radican, paradjicamente, en
nuestra ignorancia. Por eso, creo que al anlisis terico de Nozick subyacen
no
pocas
dosis
del racionalismo constructivista[x] que
Hayek
y Popper tanto criticaron, el cual, desconociendo los lmites de la razn
humana, toma la sociedad como si fuera una mquina cuyas reglas pueden ser
perfectamente conocidas y cuyo comportamiento puede ser perfectamente
predicho. Ese racionalismo se manifiesta de manera especial en el hecho de
que Nozick prescinde en su anlisis de toda referencia espacio-temporal, dando
por sentado que ese Estado mnimo es vlido para todos los tiempos y todos
los lugares, independientemente de las diversas tradiciones de los pueblos.