John Gibler

Fue el Estado
Los ataques contra los
normalistas de Ayotzinapa
(Una historia oral de la infamia)

Este libro est hecho con base en entrevistas con sobrevivientes de los ataques en contra de los estudiantes de la Escuela Normal Rural Ral Isidro Burgos de Ayotzinapa, durante la noche y
madrugada entre el 26 y el 27 de septiembre de 2014 en Iguala,
Guerrero. Las entrevistas fueron realizadas entre el 4 de octubre
de 2014 y el 19 de junio de 2015. La mayora de los sobrevivientes
pidieron proteger sus identidades con el uso de seudnimos, lo
cual se ha respetado.

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Carlos Martnez, 21, estudiante de segundo ao. Yo soy de un

municipio parecido al de Tixtla, en la regin de la Costa Grande de
Guerrero. Es un lugar muy bonito, tiene ros, tiene lagunas. De un
tiempo para ac se ha comenzado a urbanizar un poquito ms, lo
que ha generado varios problemas. Pero aun as, pues, la esencia
del pueblo y de la gente contina. Yo soy el segundo de tres hermanos. Tengo una hermana mayor, una hermana menor y yo soy
el segundo. Vivo con mi mam. Hace varios aos que mi pap se
fue de la casa, as que era mucho muy difcil quiz lograr aspirar
a otra carrera.
Cuando iba en la secundaria comenc a trabajar por las tardes.
Me iba a trabajar a un taller mecnico, trabaj en una ferretera, trabaj en una taquera. Todo para tratar de sostenerme los estudios,
porque era muy complicado para mi mam, sola, atender a tres
hijos. Despus de mucho esfuerzo, logr obtener una beca y fui a
estudiar a Acapulco cuando termin la preparatoria. Ah estuve un
ao estudiando contabilidad, pero era muy caro, porque tena que
pagar colegiatura, tena que pagar libros, tena que pagar renta, tena que pagar comida, transporte pblico, proyectos y un montn
de cosas, y era demasiado complicado sostenerme de una beca.
Yal final pues escuch de la escuela de aqu, de Ayotzinapa, y me
vine, me vine para ac esperando poder tener mis estudios, que es
lo que siempre he querido.
Tengo un compaero, un amigo que estudi aqu, que es
maestro. Cuando yo estuve trabajando un tiempo en Atoyac de lvarez, ah lo conoc y l me cont de esta escuela, me cont que era
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estudiaba. Entonces egres mi hermano y me dijo: Pues no hay

de otra, si quieres estudiar pues ve all, aprendes muchas cosas,
y s, l me explic un poco ms o menos de cmo se manejaba la
situacin en la Normal, y yo dije: S, me voy, no le pens ni dos
veces. Llegu a la Normal y la verdad que s, me senta extrao, me
senta mal, pues, porque haba dejado a mi familia. Yo no estaba
acostumbrado a salir por mucho tiempo y dejar mi casa. En la Normal no tena conocidos, llegu sin saber nada, sin conocer a nadie,
pues, yo deca: Todo sea por lograr salir adelante, para que mi
familia algn da diga: Me siento orgullosa de ti por lo que has
logrado, poco o mucho lo que has logrado es muy importante.

Juan Prez, 25, estudiante de primer ao. Casi la mayora aqu

son hijos de campesinos. All de donde yo vengo noms hay primaria, secundaria y colegio. No hay ms carrera para nosotros
para avanzarle, estudiar un poco, ya que mi pueblo est ms jodido que otras partes. Yo me decid a entrar a esta escuela, a venir a
estudiar, a ser alguien, para ir a mi pueblo y ser un maestro all,
dar clases a los chavos. Como all en mi pueblo hablamos pura
lengua mephaa, nosotros tambin queremos un maestro que hable mephaa. Esa es mi visin para m.

Coyuco Barrientos, 21, estudiante de primer ao. Mi pap se

separ de mi mam cuando yo tena quiz unos cinco aos de
edad. Nosotros vivamos en la sierra. Pero mi mam, mi hermana y yo nos venimos de donde mis abuelitos, ya ms al centro.
Mi mam nos dejaba solos por irse a trabajar. Estbamos con mi
abuela, porque mi abuelo tambin trabajaba todo el da, llegaba en
la noche, o si no, hasta la semana. Y pues de ah fui un poco ms
independiente con ellos. Ya para entrar ac, yo a mi pap no le
hablaba, ya tenamos mucho tiempo de habernos peleado. Hasta
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que yo vena. Vengo con esa meta: lograr llegar a mi comunidad a

dar clases, a ser docente de ah.

Edgar Andrs Vargas, 25, estudiante de tercer ao. Cuando

bamos en tercer ao de la prepa muchos estaban decidiendo por
dnde queran estudiar. La nica Normal que conocamos era la
de Tenera, la que est en el Estado de Mxico. Pero tengo un primo que se llama liver, l me coment eso de que en Guerrero
existe unaNormal como la de Tenera. Y pues yo la verdad nunca
me anim por ir a una Normal. l me haba comentado que su
to estudiaba en esa Normal yqueestaba muy bien, y ya l me coment que furamos, me estaba convenciendo pues yo la verdad
no quera ir. Ya l fue a sacar su ficha, ya me coment todo, me
habl cmo para sacar la ficha y ya al ltimo da me decid. Recuerdo que sal como a las dos, creo, de mi pueblo, y ya me fui con
mi pap hasta all porque es algo retirado. Mi primo ms o menos
me dio la ruta de cmo llegar y saqu ficha el ltimo da, fui uno
de los ltimos. Recorr un poco la Normal y s, ms o menos me
gust. Como yo soy muy apegado a mi primo, de hecho nos llevamos desde la primaria, estbamos alegres por ir al examen y todo.
Al ver la Normal ms me llam la atencin, al ver los murales y
todo eso y ya decid hacer el examen.

Jos Armando, 20, estudiante de primer ao. Es por eso que

nosotros venimos a Ayotzinapa, porque somos hijos de campesinos. No tenemos recursos necesarios para irnos a estudiar a otra
escuela. Y esta es una escuela de lucha, donde nos inculcan valores para seguir luchando por tener un buen futuro ms adelante,
para poder apoyar a nuestras familias. Y qu hace el Gobierno?
Mata estudiantes.

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Miguel Alcocer, 20, estudiante de primer ao. Yo vine, pues,

por falta de dinero. Yo dej de estudiar dos aos por lo mismo,
que no tena dinero. Quera seguir estudiando pero mis paps ya
no tenan para darme ms dinero y ya no haba recursos. Ya saba
de esta escuela y quera venir, pero hasta este ao me anim a venir para ac. Y as pues, les dije a mis paps que me iba a venir y
me dijeron que s. Pues era la nica opcin, por el dinero, porque
aqu no se paga nada, la comida, luego los cuartos, todo aqu te lo
da la escuela y por eso quise venir aqu.

Jorge Hernndez Espinosa, 20, estudiante de primer ao. En

la semana de prueba al principio nosotros s, la verdad que lo vimos
mal. Dijimos: Por qu nos hacen eso si nosotros queremos estudiar?. Pero la verdad que ah se valoran muchas cosas. Aprendes
a valorar desde tu familia, desde la comida, desde tus compaeros,
desde tus amigos, todo, todo, todo. Porque llega el momento en
que te cansas y dices: Ya no puedo ms, me voy a mi casa. Pero
despus dices: Voy a llegar y qu les voy a decir a mis padres?:
Me vine, no pude, no aguant, no fui capaz de pasar la semana de
prueba. Entonces te das valor t mismo y piensas en tu familia y
dices: No quiero defraudar a mi familia, quiero que mi familia se
sienta orgullosa, quiero que cuando regrese les diga: me qued.
La verdad que s, pues, es muy difcil porque trabajamos, hacemos
todo lo que hace un campesino, porque todos somos campesinos.
Pero por ejemplo, lo que un campesino hace en un mes, nosotros
lo hacemos en una semana. Entonces duplicamos el trabajo. Hay
veces que no tomamos agua, no comemos, s las hay y se siente
feo, pero al mismo tiempo dices, cuando llevas dos, tres das ya
dentro de la Normal, haciendo la semana de prueba, pues dices:
Ya pas dos das, que pasen otros cinco, aqu voy a estar, y s.

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Santiago Flores, 24, estudiante de primer ao. La semana de

prueba se siente pesada. S estaba muy pesadita. De hecho, pues,
as es esto, as es de todos los aos. Es hacer ejercicio, ir a mdulo,
chaponar, ir a ayudarles a los tos a sus tierras. Es un poco cansado y noms se queda el que aguanta la semana de prueba. Nos
ayudbamos entre nosotros. Si es que unos ya no podan correr
nos decan: Aydense entre ustedes, aydense, nunca dejen a un
compa solo, nunca se tiene que quedar nadie, cuando acaben de
correr nadie se tiene que quedar. Si se quedaba uno se quedaban
todos, o si lo podamos ayudar lo podamos cargar, pero que no
se quedara nadie. Ah el compaerismo se empez a dar, de estar
todos juntos siempre, no de dejarlos, de ayudarle al compa, as se
empez a dar el compaerismo. Se hacen grandes amistades ah
en la semana de prueba, con compaeros que no conocamos nos
hicimos mejores amigos ah.

Edgar Andrs Vargas, 25, estudiante de tercer ao. El primer

da nos metieron a todos a la sala audiovisual, los del comit nos
dijeron unas cosas, nos dieron la bienvenida ms o menos, y ya
salimos temprano, nos fuimos a descansar. Ya como a las cuatro
de la maana llegaron los de la ctedra de deportes pateando la
puerta, gritando, y uno de volada se levanta y ya. Nos queran en
cinco minutos o dos minutos en la cancha. Como ya me haban
contado ms o menos algo, ya tenamos una idea.Nos pusieron
a hacer ejercicio, y de ah pues a correr. Nos sacaron a correr. Se
me complicaba un poco porque antes sufra de asma y siempre
usaba el inhalador. Siempre tena ese temor, por lo mismo casi
no jugaba ftbol o as, porque se me qued ese temor de sufrir un
ataque. Pero ya en ese momento salimos acorrer, empezamos a
gritar. La verdad s fue algo muy cansado subir las escaleras, hacer los ejercicios, de hecho yo casi no estaba acostumbrado a eso.
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una amistad muy grande con l. Yo no lo senta ya como amigo,

lo senta como un hermano. Ahora me duele al ver que esos compaeros no aparecen.

Jorge Hernndez Espinosa, 20, estudiante de primer ao. Yo

quiero ser maestro y quiero salir egresado de la Normal. Quiero
un da contarle a mis hijos, a mis nietos: Yo estudi en la Normal
Ral Isidro Burgos de Ayotzinapa y sentirme orgulloso de decir:
Yo fui parte de esa masacre que se vivi el 26 de septiembre de
la que todo el pas entero, todo el mundo se enter, y apoyaban,
algunos criticaban, pero todo el mundo entero recibi la noticia de
Ayotzinapa, de que fuimos reprimidos.
Y me siento orgulloso de decir: Yo soy, formo partede la academia de primer ao, soy alumno de la Normalde Ayotzinapa.

Coyuco Barrientos, 21, estudiante de primer ao. Hay una

frase que muchos dicen aqu: quien ve una injusticia y no la combate, la comete.

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Asesinados en Iguala el 26-27 de septiembre de 2014

1.
2.
3.
4.
5.

Julio Csar Mondragn Fontes, 22, estudiante normalista

Daniel Sols Gallardo, 18, estudiante normalista
Julio Csar Ramrez Nava, 23, estudiante normalista
David Josu Garca Evangelista, 15, futbolista
Vctor Manuel Lugo Ortiz, 50, chofer del autobs del equipo
de ftbol
6. Blanca Montiel Snchez, 40, pasajera de un taxi en la carretera

En coma por un disparo a la cabeza en Iguala

el 26-27 de septiembre de 2014
1.

Aldo Gutirrez Solano, 19, normalista

Estudiantes normalistas desaparecidos en Iguala

el 26-27 de septiembre de 2014
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
8.
9.
10.

Abel Garca Hernndez, 19

Abelardo Vzquez Penitn, 19
Adn Abrajn de la Cruz, 20
Alexander Mora Venancio, 19
Antonio Santana Maestro, 19
Benjamn Ascencio Bautista, 19
Bernardo Flores Alcaraz, 21
Carlos Ivn Ramrez Villarreal, 20
Carlos Lorenzo Hernndez Muoz, 19
Csar Manuel Gonzlez Hernndez, 19
176

11. Christian Alfonso Rodrguez Telumbre, 21

12. Christian Toms Coln Garnica, 18
13. Cutberto Ortiz Ramos, 22
14. Doriam Gonzlez Parral, 19
15. Emiliano Alen Gaspar de la Cruz, 23
16. Everardo Rodrguez Bello, 21
17. Felipe Arnulfo Rosas, 20
18. Giovanni Galindes Guerrero, 20
19. Israel Caballero Snchez, 19
20. Israel Jacinto Lugardo, 19
21. Jess Jovany Rodrguez Tlatempa, 21
22. Jons Trujillo Gonzlez, 20
23. Jorge lvarez Nava, 19
24. Jorge Anbal Cruz Mendoza, 19
25. Jorge Antonio Tizapa Legideo, 20
26. Jorge Luis Gonzlez Parral, 21
27. Jos ngel Campos Cantor, 33
28. Jos ngel Navarrete Gonzlez, 18
29. Jos Eduardo Bartolo Tlatempa, 17
30. Jos Luis Luna Torres, 20
31. Jhosivani Guerrero de la Cruz, 20
32. Julio Csar Lpez Patolzin, 25
33. Leonel Castro Abarca, 18
34. Luis ngel Abarca Carrillo, 20
35. Luis ngel Francisco Arzola, 20
36. Magdaleno Rubn Lauro Villegas, 19
37. Marcial Pablo Baranda, 20
38. Marco Antonio Gmez Molina, 20
39. Martn Getsemany Snchez Garca, 20
40. Mauricio Ortega Valerio, 18
41. Miguel ngel Hernndez Martnez, 27
42. Miguel ngel Mendoza Zacaras, 23
43. Sal Bruno Garca, 20
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Agradecimientos
Agradezco con todo mi corazn a quienes platicaron conmigo y
compartieron sus historias para este libro y a todas las familias y
los estudiantes de Ayotzinapa que han mantenido sin descanso la
bsqueda y la lucha por los desaparecidos, los cados, los heridos y
por la verdad y la justicia; tambin a las personas solidarias que me
ayudaron muchsimo durante los meses de reportear en Guerrero:
Kau Sirenio, Marcela Turati, Sergio Ocampo, Lenin Ocampo, Ulises Domnguez, Vania Pigeonutt, Margena de la O, Jess Guerrero, Mara Bentez, Daniela Rea, Norma Gonzlez, Edith Victorino,
Naira, Fsun, Almazn, Diego, Sandra, Meo y Nayeli, Ray y Yuri,
Adriana, Alba, A., Andrs y Sara, Enrique, Andaluca, Francesca,
Eileen, Elia y Luz, Diana y Matt, Snchez, Valencia y Tania, Paco
y Jovi, Nel, Lolita, Emiliano, Ro Doce, Ana Paula, M., C., Ral,
Thala y Temoris, Valin, David Espino, Alejandro Guerrero, Natividad Ambrocio, Maya Telumbre, Pablo Rojas, Patricia Salinas,
Daniel Alarcn, Ted Lewis, Kit Rachlis, Douglas McGray, California Sunday Magazine, Suzanne Gollin y Valentina Lpez DeCea,
Edith Lpez Ovalle, Fernanda Gmez, Paula Mnaco y todas las
compaeras y los compaeros de h.i.j.o.s. Mxico.

178

eplogo

Mxico, hoy
Lolita Bosch

Me piden tan a menudo que explique qu est pasando en Mxico, a quin y por qu, que hay veces que ya no s cmo explicar
lo que tengo la sensacin de que todos y todas deberamos haber
visto y entendido. Sobre todo desde el Estado espaol, que todava
hoy goza de instituciones y personas que si no fuera por la ayuda y
la solidaridad de Mxico, el franquismo hubiera desaparecido definitivamente. En Mxico hay una guerra civil, tal y como en hubo
una en Espaa del 36 al 39 (a pesar del imaginario de Hollywood o
de las guerras europeas de que las guerras se libran en trincheras,
algo que nunca ha ocurrido en Amrica Latina ni en muchos otros
lugares del mundo). Pero a diferencia del apoyo que recibimos de
la Repblica mexicana cuando Franco se alz en Espaa, aqu, hoy,
hacemos como si all no estuviera pasando nada. Las cifras son estremecedoras y cambiantes. Pero, haciendo un resumen que nos
avergenza hacer porque omite el dolor y la brutalidad, desde que
en 2007 el presidente Felipe Caldern sali en la televisin vestido
de militar y le declar pblicamente la guerra al narcotrfico, ya
han pasado dos presidentes, han desaparecido decenas de miles de
personas (una cada cinco horas durante el gobierno de Caldern,
una cada hora y cincuenta y tres minutos durante el gobierno de
Pea Nieto. Es decir, trece mexicanos al da) y han muerto tantas
personas que el Gobierno las ha dejado de contar porque dice que
pierde dinero y que lo necesita para luchar y hacer efectiva su estrategia contra el narco. Pero se calcula que del ao 2007 hasta
hoy se han cometido alrededor de doscientos mil asesinatos de los
que hemos encontrado los cuerpos (o partes), hay quien calcula
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que algn da contaremos que han desaparecido el mismo nmero de personas y los desplazados internos se acercan al cuarto de
milln. Todo ello, no hace falta decirlo, sin contar a los migrantes
que tambin desaparecen, tambin mueren asesinados de maneras brutales y tambin tienen que cambiar de ruta o quedarse
quietos en espera de que la violencia se mueva de un lugar a otro
para intentar llegar a su destino, aunque el Gobierno mexicano no
los tenga en cuenta si bien son violentados en su territorio.
Se prev, por ejemplo, que una mujer migrante ser violada ocho
veces durante el trayecto en el lomo de un tren de carga que recibe
el nombre de La Bestia y que hace varios transbordos de la frontera
sur hasta la frontera norte de Mxico. Incluso hay una orden de
monjas que en la frontera sur, antes del paso, ponen una piadosa
inyeccin anti Mxico para que de este modo, al menos, estas
mujeres que migran, muchas de ellas con sus hijos, incluso sus
bebs, no se queden embarazadas. La mayora, no hace falta decirlo, huye de la pobreza. Y la mayora de lo que nos est pasando hoy
en Mxico tiene la raz en ese mismo y oscursimo lugar.
Un 54 % de la poblacin mexicana es pobre y de esta un 40 %
vive en situacin de miseria, es decir que tienen menos de un dlar
al da para mantener a su familia. La corrupcin, la ineptitud, la falta
de inters y los vnculos delictivos de las autoridades hacen que en
Mxico un 98 % de los delitos que se denuncian (y se calcula que
solo se denuncia un 10 %) no sean resueltos y por tanto queden impunes. Y, finalmente, la propaganda del Gobierno mexicano y todos
los prejuicios que nos llegan a travs de los libros, las series, la televisin y la ignorancia, nos hacen pensar que el narcotrfico es el gran
causante de esta debacle social.
No es as.
Ms all del clasismo, el machismo, el desprecio hacia las
comunidades indgenas, la xenofobia y los setenta y un aos de
dictadura priista (que en Mxico se llama dictablanda porque
en muchas partes del mundo e incluso del interior del pas nunca
182