Quaestio I
Quaestio I
Quaestio I
especifican propiamente por el fin, pues los actos morales son lo mismo
que los actos humanos.
Artculo 4: hay un fin ltimo de la vida humana?
Respondo: Hablando con rigor, es imposible proceder hasta el infinito
en los fines, bajo cualquier concepto. Porque en todas las cosas que
dependen entre s por naturaleza, si se quita la primera, desaparecen las
dems relacionadas con ella. Por eso demuestra el Filsofo, en el VIII
Physic., que no es posible proceder hasta el infinito en las causas
motoras, porque no habra un primer motor, y, faltando ste, las otras
no podran mover, pues reciben el movimiento del primer motor. Ahora
bien, dentro de los fines se distinguen dos rdenes: el orden de
la intencin y el orden de la ejecucin, y en ambos debe haber
algo que sea primero. Lo primero en el orden de la intencin es
como el principio que mueve al apetito; por eso, si se quita el
principio, el apetito permanece inmvil. La accin comienza a partir
de lo que es primero en la ejecucin, por eso nadie comienza a hacer
algo si se suprime este principio. El principio de la intencin es el ltimo
fin, y el principio de la ejecucin es la primera de las cosas que se
ordenan al fin. As, pues, por ambas partes es imposible un proceso al
infinito, porque, si no hubiera ltimo fin, no habra apetencia de nada, ni
se llevara a cabo accin alguna, ni tampoco reposara la intencin del
agente. Si no hubiera algo primero entre las cosas que se ordenan al fin,
nadie comenzara a obrar ni se llegara a resolucin alguna, sino que se
procedera hasta el infinito. En cambio, las cosas que no estn
ordenadas entre s por naturaleza, sino que se unen accidentalmente,
pueden tener infinitud, pues las causas accidentales son
indeterminadas. Y as, puede haber infinitud accidental en los fines y en
las cosas que se ordenan al fin.
Artculo 5: Puede un hombre tener muchos fines ltimos?
Respondo: Es imposible que la voluntad de un hombre desee a la vez
objetos diversos como fines ltimos. Podemos demostrarlo con tres
argumentos. El primero: como todo desea su propia perfeccin, lo que
uno desea como fin ltimo, lo aprecia como bien perfecto y
perfeccionador de s mismo. Por eso dice Agustn, XIX De civ. Dei:
Llamamos ahora fin de un bien, no que se consuma hasta dejar de
existir, sino que se perfeccione hasta ser plenamente. Es necesario, por
tanto, que el fin ltimo colme de tal modo los deseos del hombre, que no
excluya nada deseable. Y esto no puede darse si requiere, para ser
perfecto, algo distinto de l. Por tanto, es inadmisible que el apetito
desee dos cosas como si ambas fueran un bien perfecto. Segundo
argumento: En el proceso del apetito racional, que es la voluntad, es
necesario que el principio sea algo naturalmente deseado, del mismo
hombres, pues unos desean las riquezas como bien perfecto, otros los
placeres, y otros cualquier otra cosa. Del mismo modo que lo dulce es
agradable a todos los gustos, pero unos prefieren la dulzura del vino,
otros la de la miel, otros la de cualquier otra cosa. Sin embargo, se debe
considerar propiamente como dulzura ms agradable la que satisface al
gusto ms refinado. De igual modo se debe considerar como bien
ms perfecto el deseado como fin ltimo por quien tiene el
afecto bien dispuesto.
Artculo 8: Las dems criaturas tienen el mismo fin ltimo?
Respondo: Como seala el Filsofo, en II Physic. y en V Metaphys.,
hablamos del fin de dos modos, a saber: cuius y quo; es decir, la cosa
misma en la que se encuentra el bien y su uso o consecucin. Por
ejemplo: el fin del cuerpo grave es el lugar inferior, como cosa, y estar
en el lugar inferior, como uso; y el fin del avaro es el dinero, como cosa,
y su posesin, como uso. Por tanto, si hablamos del fin ltimo del
hombre refirindonos a la cosa misma que es el fin, entonces todos los
dems seres tienen el mismo fin ltimo que el hombre, porque Dios es el
fin ltimo del hombre y de todas las dems cosas. Pero, si hablamos del
fin ltimo del hombre refirindonos a la consecucin del fin, entonces las
criaturas irracionales no tienen el mismo fin que el hombre. Porque el
hombre y las dems criaturas racionales alcanzan el ltimo fin
conociendo y amando a Dios, y esto no lo consiguen las otras criaturas,
que logran el ltimo fin por participacin de alguna semejanza de Dios,
porque existen, viven o incluso conocen.