Periódico El Dia Núm

Descargar como doc, pdf o txt
Descargar como doc, pdf o txt
Está en la página 1de 4

PERIDICO EL DIA NM. 632.

MADRID, LUNES 13 DE FEBRERO DE


1882.EDICIN DE LA NOCHE.
PERTENECE AL SUPLEMENTO

LA JUVENTUD DE FLAUBERT II
Mr. Du Camp conoci Gustavo Flaubert en 1843 cuando el futuro novelista apenas contaba
veintin aos. Estaba en Pars, como tantos otros provincianos, con el protesto de estudiar
derecho. El centralismo que en todas las esferas de la vida domiaa en Francia, como en Espaa,
tiene la culpa de esta gran calamidad de los abogados innmeros que se acumulan en Pars y en
Madrid, aspirando abrirse paso, hacer carrera fuera de su pas, lejos de la tierra que se
deben. Si estudiis la biografa de la mayor parte de los franceses y de los espaoles notables de
este siglo, veris casi siempre la misma historia: el joven que ha de ser honra da los suyos
entabla lucha cruel con su familia por abandonarla y venir la capital, donde le esperan, segn
l, grandes triunfos; segn la experiencia, das de prueba y veces de martirio.
El pretesto casi siempre es el derecha. Si ste se estudiara con profundo sentido, como obra
viva, racionalmente, en fin, acaso los grandes ingenios que han tenido que estudiarlo por
pretesto se hubieran aficionado las leyes de veras, por lo menos sera su odio la curia y la
jurisprudencia lbrega mucho menor de lo que es. Pero el derecho, segn se ensea en Francia y
en Espaa, es todo lo contrario de la poesa, de las nobles y grandes jiaBiones, y hasta de la
moral muchas veces. Flaubert, como todos loa que tienen en la frente aquello que senta Chenier
al ir la guillotina, y tambin como muchos que creen tenerlo y no lo tienen, se cansaba en su
provincia, renegaba de la vida montona de Eouen; no le haba llegado el tiempo de suspirar por
su patria y amar la soledad de Croisset sebre todo. Para ir Pars necesit transigir con el
derecho, pero jams lo estudi con entusiasmo. En sus primeros estudios, los que hizo en su
provincia, habla preferido Rousard Virgilio, Blantome Fene on: y es que siempre los
pedantes se dan t'jl arte para hacernos aborrecer todo lo clsico, qae no hay quien no comience
la vida de las letras siendo furioso romntico, aunque despus tenga que arrepentirse. Flaubert
no se arrepinti nunca; nunca fu un clsico pesar de su amor la belleza correcta y pura, de
su adoracin por la forma. Sus autores favoritos eran entonces Byron y Shakespeare, que leia en
ingls y comentaba luego con un amigo de colegio, que lo fu despus toda la vida, no larga, del
amigo; ste se llamaba Alfredo Le Poitevin, y era, segn sus palabras, IM grieg del Bajo
Imperio. En las obras de Flaubert puede notarse la influencia de esta amistad de su adolescencia
y de su juventud. Al rev* de lo que suelen hacer los que no han nacido para literatos y o son
desde la primera juventud, Flaubert, que era un alma de artista y de poeta en todo y para todo,
despreci en su juventud el oficio de e.scritor, como oficio, y si bien amaba las letras sobre todo,
no anduvo buscando el traje de literato antes de tener al literato deatro. Estudiaba el derecho
aunque no lo eateadia, porque iio es fcil de entender tal como se ensea; era hermoso, una gran
figura, y el amor, que para l hubiera sido siempre fcil, no le atraa, hua de las mujwes tenaces
que le bascaban, y no fu nunca en sus amore.s uu |)lat- nico; para l ra esto cosa accesoria.
Pero le encantaba la vida alegre, disipada; era incansable, apasionado, violento; era, enrigor,
menssan% incorpore sano, y gozaba como un ser superior aquel maravilloso equilibrio de
dittcultade.i. En los espectculos para otros vulgares y hasta mezquinos, vea oellezas y
atractivos que le haciau buscarlos con afn, y era qae vea Flaubert elementos de belleza que
para los dems quedaban en la sombra. Comprenda ms que nada lo ridsulo, y aunque fu

constante azote de toda clase de necedades, enemigo encarnizado de los que l llamaba los
burgueses, danda la palabra ms extensin de la que admite su concepto, buscaba, sin
embargo, las ocasiones de presenciar algo grotesco, algo digno de sus carcajadas estrepitosas,
expresin noble y pura de sus alegras olmpicas. Las letras ie aprisionaban; quera desafiar
Gustavo Planche, que habia censurado Vctor Hugo; deliraba por Antony, y semanas enteras
remed el acento y los gestos del actor Derval, que representaba el papel de su dolo. En este
espritu cmico de imitacin, que tenia en mucho Flaubert, est el germen de sus profundas
obseryaciones serias y cmicas en las obras que despus le hicieron clebre. Desdeaba
B'laubert, como sus amigos, los autores precoces que dan al pblico tonteras beneficio da
inventario y con hipoteca del genio que luego han de tener: escribir era sencillamente ridicalo
para aquellos fanticos de la literatura; todo lo leian, todo lo discutan, pero cepos quedos, nada
de escribir todava. Esta era la consigna; pero cada cual tenia un pecado secreto. El de Flaubert
se llamaba Noviembre, y era una novela extraa, que no deba parecerse ninguna otra, y se
pareca demasiado muchas, como suele suceder con estas ebras extraordinarias de la juveatud.
Noviembre ea aik novela que no ha pajwd* *e iadita. Mximo Da Camp es el primero que
habla de ella al pblico; Zola no sabia que hubiera existido, pues no la menciona siquiera en su
estudio de Flaubert. Era esta novela una autobiografa. El autor no hablaba ms que de lo que
sabia del mundo, que era bien poco entonces, y tenia que hablar de s mismo, que era lo mejor
que crea conocer. En este libro se vea la infiaenoia de Chateaubriand, cuya manera de pintar la
naturaleza siempre admira el autor de Salammb, y la influencia de Quinet, que tambin habia
de llegar, como veremos, la primor tentativa de ia Vision de San, Antonio. En la poca en que
escriba Noviembre Flaubert, profesaba ya las ideas estticas que mucho ms tarde combata
Zola, hallndolas, con razn, opuestas lo que el maestro practicaba. Tiene razn Mr. Du
Oamp; Flaubert fu siempre un lrico; pero exolusiv.amente lrico slo en la intencin, en teora,
pero en la prctica un naturalista, y el mejor naturalista por cierto. Un libro, deca, no debe
probar nada. Esto es verdad, aadiendo algunas palabras: Un libro no debe proponerse probar
nada. Pero es difcil que un buen libro, escrito conforme las leyes naturales de la lgica
retrica, no pruebe mucho les ojos de quien sabe leer entrelineas. Ejemplo, Madame Bovary.
Cuando Flaubert leia su Noviembre sus amigos, ya les hablaba de planes que mucho despus
fueron obras muestras de aquel artista incomparable. Asi se trabaja para la inmortalidad. La obra
que acompaa al artista gran parte de la vida, que le turba sus alegras ocupndole el cerebro, y
ya le consuela por lo mismo en las tribulaciones; ia obra para la cual nunca se cree bien
preparado, y que vive aos y aos entro de l, con miedo dei mundo y del vulgo que lee sobre
todo, esta es la que queda, esta ea la que lleva en s al cabo la expresin de algo que la
humanidad sinti siempre y nunca acert decir hasta que, tras labor mproba, pudo decirlo el
poeta Flaubert: el estudiante pensaba ya en un cuento que era como el protoplasma de
Salammi, y preparaba un Diccionario de lugares comunes (Diccionn&ire des idees recuesj, que
le sirvi no poco para sus JWgueses de Madame Bovary y de Bouvord y Pecuehat; sobretodo
para hacer aquel libre-pensador, Sancho de los libre-pensadores, qae se llama Homais, el
boticario. * III Flaubert sali suspenso en el grado de la licenciatura, pero tuvo el honor de que
le examinara el ilustre Rossi, que hizo prodigios de habilidad y de indulgencia por salvarle.
Imposible. El autor de Noviembre no haba comprendido Triboriano, varn m|igmifleo^ Pens
volver examinarse; pero sus veintids aos iban ser edad de crisis para su vida; rindile una
enfermedad terrible, una neurosis que le atorment toda la vida. El padre de Gustavo era un
mdico-cirujano famoso en Eouen, y de grandes conocimientos prcticos; pero su Ciencia fu
impotente contra la terrible enfermedad que Boerhaabe llam el temblor de tierra del hombre.
Esta crisis de la salud influy en toda la vida del gran novelista; su enfermedad le hizo buscar la
soledad, temer el trato; y de quien habia nacido para una vida activa, hizo un hombre sedentario.

Flaubert hizo un viaje Oriente; despus fu Cartago recoger datos impresiones que
necesitaba para Salammb, pero el rque l no pretenda flegelar, un burgus sabio, prudente,
tranquilo, que hacia peridicamente su viaje de Rouen Pars, de Pars a Rouen. Mr. Du Camp
opina que en este tiempo el extraordinario talento de Flaubert estaba ya en la plenitud de su
desai-rollo; era un joven superior por su inteligencia su edad y todos sus contemporneos;
despus no adelant nada, ya no necesitaba progresar; todo lo que pens y escribi en adelante,
dice su amigo, lo tenia pensado y proyectado en su juventud. Este juicio puede tener algo de
cierto, pero tampoco cabe negar que en lo que corresponde ' la observacin, al trabajo, al
profundo estudio en sus libros, que es gran parte de su mrito, no poda existir en los aos que
Du Camp se refiere. Se me olvidaba hablar de otro viaje de Flaubert, que l despreciaba, su
viaje Italia; en Genova, en el palacio Doria, ante un cuadro de Tenier, acase comcibi la idea
de su Tentacin de San Antonio. Peco despus escribi una novela que titulaba La educacin
sentimental, y su bigrafo asegura que en nada se pareca la que con el mismo titulo public
en 1869. Pero esto prueba otra vez las hondas races que en su e.-fpritu echaban sus
concepciones artsticas, y era que les daba parte de su propia vida, tanta verdad, que persistan
en l como recuerdos de la real, como pedazos de su espritu. Asi tiene el vigor, el relieve, la
naturalidad que tienen sus mejores libros. El que quiera naber lo que quiere el naturalismo,
estudie esta gnesis de las obras de Flaubert, penetre esta identidad del hombre y del libro, y
ver que lo que pide el naturalista no es sino lo que la lgica del arte pide gritos y lo que
comprende todo el que sin preocuDaciones atienda. Aquiles Flaubert, el padre de Gustavc, supo
que su hijo escriba, despus de constarle que no estudiaba. Pero no poda oponerse
abiertamente las aficiones del pobre enfermo. Leme eso, le dijo. El padre se sent en una
butaca. Gustavo ley su Educacin sentimental. Ei noble cirujano, que ms tarde habia de ser
retratado por el pincel amorosa de su hijo en el personaje de Madame Bovary, Mr. Larivire, el
ilustre cirujano, digo, las pocas pginas dorma profundamente. En 1846 qued Flaubert sin
aquel padre que tanto le amaba, pesar de despreciar sus libros. En esta poca Gustavo era muy
desgraciado : su tristeza era continua, verdadera ; no tenia nada del sensuchl ni de la sandide,
esa tristeza humana de cualquier hombre; era un enfermo, y un hurfano, y un hombre de su
tiempo, llimo de aspiraciones grandes y its dudas tristes: esto bastaba para inspirar las cartas
llenas de descontento que copia Mr. Du Camp en la Revista de ambos mundos. Flaubert, que
jams abandonaba sus planes, comenz escribir la Tentacin de San Antonio. Como hizo
siempre despus en sus libros, quiso ir las fuentes consultar, quiso trasladar al papel la mayor
cantidad posible de verdad, y ley los Santos Padree v las actas de los Concilios en la coleccin
Labb y Cossor. Bouilhet el poeta, su ntimo amigo, ie decia: Ten cuidado; vas hacer de San
Antonio un sabio, y no era ms que un inocente. Mucho despus de la revolucin de 1848,
Flaubert llam Bouilhet y Du Camp su retiro de Croisset. Su Sm Antonio estaba
terminado. Pero ay! tampoco este es el libro que todos conaeemes. Pedia el voto de los amigos,
y stos, que lo eran verdaderos, y no como aqu nos piden que seamos, aduladores, embusteros,
sus amigos le dijeron, aunque con miedo de provocar una crisis nerviosa en aquel pobre
enfermo, que la Tentacin no servia ; que era un libro lleno de bellezas intiles, porque el
conjunto era intolerable. Flaubert grit, protest; pero, como todos los de su temperamento,
acab por aplacarse y si no por convencerse, si pudo ver que los defectos que los compaeros de
trabajo le sealaban eran evidentes. Hoy la Tentacin de San Antonio vive expurgada de muchos
de aquellos arranques lricos intempestivos, y pesar de los defectos que monsieur Du Camp
sigue viendo, esta obra es admirada y admirable. Este ensayo desgraciado, en parte fu el origen
de la obra maestra de Flaubert. Los consejeros le rogaron que dejase estos asuntos
extraordinarios, que aprovechase sus facultades excepcionales estudiando un asunto ms real,
ms inmediato, y le propusieron que contara sencilaiaente la historia de un Mr. Delaunay, un

mdico de la vecindad.Recordando ms tarde la conversacin que le dio su desengao, decia


Flaubert Du Camp: Estaba invadido por el cncer del lirismo y me habis operad. El
cncer del lirismo! Esta confesin y la que hizo cuando el mal xito de La educacin
sentimental, prueban que Flaubert no igaoraba, despus de todo, y pesar de sus protestas, la
tcnica del naturalismo, y que la tuvo muy en cuanta para escribir sus mejores obras; sobre todo
su obra maestra, Madtme Bovary. La historia de Mr. Delaunay y de su esposa, que escribi en
efecto Flaubert por consejo de Du Camp y Bouilhet, es esa Madame Bovary que ha valido su
autor la inmortalidad. Pero al llegar aqu me detengo, porque concluyen en rigor los aos de
aprendizaje del gran maestro del naturalismo. Cuando trabaj en su gran libro, que lo ocup
muchos aos, paro que fu naciendo sin intermitencias, Flaubert ya no era el genio que buscaba
la expresin y el asunto propios de su grandeza; era el genio que esculpa ya el monumento de
su inmortalidad. Jvenes espaoles, que desde la adolescencia so- is con los laureles del arte
ms que con el arte mismo; mirad que esta prisa por llegar al templo de la gloria, ms que de
vida habla de lo corto del aliento,\u e no sabe esperar el tiempo de la sazn. Aprended, si valis
algo en efecto, del gran novelista da Normanda; estudiad su vida literaria en la juventud,
imitadla como Kempis imita los hechos y el corazn de Cristo. Si nacistis para inmortales,
pensad qne la inmortalidad no acaba, y para ella no son nada algunos aos de provechosa
espera. Si nacisteis para la sombra, qu ese aan de sepultaros tan pronto en el panten ail
olvido"!
CLARN.

http://hemerotecadigital.bne.es/issue.vm?
id=0002128603&page=6&search=madame+bovary&lang=es [consultado el 19 de abril de
2016].

También podría gustarte