De-Castellón J Obligaciones
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Facultad de Derecho
Departamento de Derecho Privado
TABLA DE CONTENIDOS
I. Introduccin.1
II. Trabajo monogrfico.. ..................................................................6
III. Extractos sobre Obligaciones Parte General....41
IV. Fichas de anlisis de sentencias...........85
RESUMEN
I. INTRODUCCIN
Esta memoria se enmarca dentro del trabajo de Actualizacin Repertorio del Cdigo Civil:
Obligaciones Parte General, a cargo del profesor Sebastin Ros.
Las materias a revisar fueron todas las incluidas en Obligaciones Parte General.
E. Descripcin de la materia abordada en esta tesis
Esta memoria aborda la revisin de la jurisprudencia durante el ao 2009, con el fin de
examinar los precedentes en materia.
11
12
Peailillo Arvalo, Daniel. Obligaciones, Teora General y Clasificacin. Santiago. Jurdica, 1 ed. 2003. p. 488.
C. Suprema, 19 octubre 2009. G.J. N 352, p. 83. L.P. N 42870.
13
Baraona Gonzlez, Jorge. La exigibilidad de las obligaciones: Nocin y Principales Presupuestos (Con Especial nfasis
en las Clusulas de Aceleracin) en Revista Chilena de Derecho, Vol. 24 N 3. 1997. p.509.
14
Repertorio de Legislacin y Jurisprudencia Chilenas, Cdigo Civil y Leyes Complementarias Tomo V. Santiago, Jurdica,
3 ed. 1997. p.182.
15
Ruz Lrtiga, Gonzalo. op.cit. p. 174.
10
11
Salvo en caso de caducidad ipso iure quiebra- que por lo dems se produce como
efecto de una declaracin judicial, en los dems casos del art. 1496 CC, como se ha
dicho, la caducidad no opera necesariamente con efecto retroactivo, sino que el acreedor
debiera tener la facultad de establecer el momento de eficacia de la clusula, y lo
razonable es pensar que no ser otro que a partir de la intimacin al deudor, aunque nada
obsta el hacerla exigible con antelacin, siempre que se haga con posterioridad a la
aparicin de la causa fundante.20
ii) Caducidad convencional del plazo. Jurisprudencia durante el ao 2009.
Como vimos, el caso ms comn de caducidad convencional del plazo es la llamada
clusula de aceleracin, la que se encuentra presente en obligaciones de cumplimiento
fraccionado o pago en cuotas sucesivas. La mayor problemtica para los tribunales de
justicia ha sido precisamente el determinar el momento en que opera, y por consiguiente,
el momento en que se hace exigible la totalidad de la deuda y comienza a correr el plazo
para la prescripcin extintiva.21
En las obligaciones fraccionadas o divididas en cuotas, cada cuota tiene una fecha de
vencimiento independiente, de tal forma, que su exigibilidad y plazo de prescripcin son
individuales y difieren las unas de las otras. Como consecuencia, podra resultar que la
accin para cobrar determinadas cuotas se encuentre prescrita pero que respecto de
otras todava se encuentre vigente.
Si consideramos que la intencin de la clusula de aceleracin, es precisamente el hacer
exigible la totalidad de la deuda ante el evento del incumplimiento en el pago de una de
sus cuotas, el determinar desde cuando opera la clusula de aceleracin fija tambin el
momento desde cuando comienza a contar el plazo de prescripcin extintiva, de todas
aquellas cuotas que an no se hubiesen devengado.
a) Necesidad de manifestacin expresa del acreedor para hacerla efectiva:
Parte de la jurisprudencia ha estimado que las clusulas de aceleracin de las
obligaciones cuyo servicio se encuentra dividido en cuotas, estn establecidas en
beneficio del acreedor, y constituyen una aplicacin del principio de la buena fe, y por ello
20
21
12
no dan lugar a la prescripcin sin que medie la manifestacin expresa del acreedor en
orden a hacer efectiva dicha clusula.22
En otras palabras, la caducidad anticipada del plazo no opera salvo que el acreedor
manifieste su intencin de hacer anticipadamente exigible la totalidad del crdito que se
adeuda, aunque no se haya devengado an. Si el acreedor no hace uso de este derecho
exclusivo, cada una de las parcialidades en que est dividido el crdito tendr una
exigibilidad parcializada y as tambin el momento en que comienza a correr el plazo de la
prescripcin extintiva de cada una de ellas.
En apoyo de esta corriente interpretativa podemos sostener, como vimos, que las
causales de caducidad anticipada del plazo que seala la ley, tienen un factor comn, y
es que fueron establecidas por el legislador en proteccin del acreedor.23 As vemos
tambin, que, salvo el caso especial de la quiebra, para que se haga anticipadamente
exigible el crdito, debe existir una actividad positiva del acreedor dirigida ejecutar la
exigibilidad anticipada. En el caso de la clusula de aceleracin, esta tambin se pacta en
beneficio del acreedor, quien pretende evitar las diversas inconveniencias alternativas
que se le presentan con la mora de las cuotas: ir cobrando cada cuota aisladamente a
medida que se incumple, esperar el incumplimiento de varias para iniciar un cobro ms
importante, esperar el extenso plazo hasta la ltima cuota.24
La crtica sin embargo, razn por la cual hoy ha sido abandonada por fallos recientes, es
que la caducidad convencional del plazo ha sido aceptada por la doctrina y jurisprudencia
nacional, especficamente en virtud del principio de autonoma de la voluntad, y pretender
restringir la aplicacin que convengan las partes para la misma, sin que exista una
restriccin legal, parece una contradiccin insalvable.
b) Interpretacin de la voluntad de las partes en virtud de la libertad contractual.
Como se dijo en la letra anterior, la caducidad convencional del plazo fue aceptada por la
doctrina y jurisprudencia nacional en virtud del principio de la autonoma de la voluntad
consagrado en el artculo 1545 de nuestro Cdigo Civil.
22
Repertorio de Legislacin y Jurisprudencia Chilenas, Cdigo Civil y Leyes Complementarias Tomo V. 3 ed. Jurdica,
1997. p.225
23
Ruz Lrtiga, Gonzalo. op.cit. p. 173.
24
Peailillo Arvalo, Daniel. op. cit. p. 488.
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25
14
Clusulas redactadas en trminos tales que, ante el retardo y/o mora en el pago de una
de las cuotas, da derecho o dar derecho al acreedor para exigir el total de la deuda o
su saldo, se entiende extendido en trminos imperativos, de manera que una vez
verificado el retardo y/o mora, comienza a correr el plazo para que opere la prescripcin
extintiva del total de la deuda o su saldo.
Por el contrario clusulas redactadas indicando que la mora y/o retardo en el pago de una
de las cuotas, facultar al acreedor para exigir el total de la deuda o su saldo, se
entiende extendida en trminos facultativos, de manera que el momento en que
comienza a correr el plazo para que opere la prescripcin extintiva de la deuda o de su
saldo, requiere primero una actividad del acreedor dirigida a ejecutar la caducidad
anticipada del plazo.
Desde el punto de vista lgico pareciera ser esta la interpretacin ms slida, sin
embargo, es tambin aquella que entrega menor certeza en cuanto a su aplicacin. Para
combatir esto, es necesario que exista la mayor uniformidad posible entre la interpretacin
que le dan los diferentes fallos de los tribunales de justicia a aquellas clusulas
redactadas en trminos similares.
Una problemtica adicional, que se observa en las clusulas de aceleracin de
anticipacin facultativas, es la naturaleza del acto a travs del cual el acreedor manifiesta
su intencin de acelerar el crdito. Para el autor Baraona Gonzlez El acto de voluntad
que anticipa el cumplimiento tiene una naturaleza de suyo recepticia, y por ello, para ser
eficaz debe ser puesto en conocimiento del deudor. Por lo mismo, en estos casos,
mientras el acreedor no manifieste su voluntad de hacer exigible el crdito, de forma clara
y directa, y no lo notifique as a su deudor, no se puede producir la anticipacin, porque no
se ha modificado de la modalidad del cumplimiento () No pienso que esa notificacin
deba ser necesariamente judicial, tambin admito que pueda ser eficaz la notificacin
extrajudicial. Lo que s me parece de la ms elemental lgica es que si el acreedor decide
anticipar el vencimiento por la va judicial debe estarse a los efectos que el camino
seguido produce y, por lo mismo, no hay exigibilidad del crdito en tanto no se notifique
judicialmente la aceleracin. 29 Este autor agrega adems que el acto en que se invoca la
aceleracin por el acreedor debe enmarcarse dentro del principio de la buena fe contenido
29
15
en el art. 1546 del Cdigo, lo que supone que no cualquier manifestacin producir la
aceleracin, estando el juez facultado para controlar dicha declaracin de voluntad.30
En apoyo de lo sostenido por el profesor Baraona Gonzlez, reconociendo lo oscura que
ha sido la jurisprudencia en esta materia, la Corte Suprema en fallo de 28 de septiembre
de 1994 sentencio que la clusula de aceleracin pactada en el presente caso, slo ha
podido ser puesta en accin por el acreedor y en el momento en que l haya decidido
cobrar el total de lo adeudado, hecho que slo ha podido efectuarse por la notificacin de
la demanda en que as se solicita, lo que acaeci, segn se dijo, el 9 de julio de 1991,
fecha en que se notific al deudor Sr. Rojas Daz y, en consecuencia se hizo exigible la
deuda en su totalidad.31
La misma Corte confirma esta doctrina en fallo de 30 de enero de 1997, en donde al
referirse sobre la redaccin de una clusula de aceleracin seal que sta otorg una
facultad al acreedor dar derecho- y en este caso, es decir, si se hace uso de ese
derecho, se entender que el plazo de todas las cuotas se encuentra vencido y exigible.
Agrega en su considerando Octavo: Que as interpretada la intencin de las partes
resulta que la obligacin que se cobra en autos se hizo exigible solamente con el
requerimiento hecho al ejecutado, por lo que no ha podido transcurrir con anterioridad
plazo alguno de prescripcin ya que exigibilidad de la obligacin se produce
simultneamente con el ejercicio de la facultad de cobrar32.
Opinin diferente expone la profesora Alejandra Aguad Deik, quien sostiene que la
manifestacin de voluntad del acreedor, en casos de clusulas de aceleracin con
carcter de facultativas, de acelerar el crdito, es un acto jurdico unilateral de carcter no
recipticio constituyendo una conducta jurdicamente relevante en relacin con el ejercicio
de un derecho propio, pues el acreedor ha autolimitado su ejercicio al cobro total de la
deuda. De tal manera que la declaracin de voluntad, manifestada en la demanda,
produce por s sola, un acto jurdico eficaz, que establece derechos definitivamente
constituidos, suscitando en el deudor una expectativa seria de comportamiento futuro de
suerte que impedira, luego, que el mismo acreedor ejerciera la pretensin de esperar el
30
16
vencimiento de los plazos pactados para cobrar las cuotas en que se dividi el capital,
aduciendo la exigibilidad postergada en el tiempo.33
c) El incumplimiento fija su poca.
Una tercera lnea interpreta sostiene que la clusula de aceleracin es un derecho
otorgado al acreedor de hacer exigible el total de una deuda, o su saldo, dividida en
cuotas, ante el incumplimiento de una o ms de ellas. Como tal, el momento en que opera
la caducidad anticipada es precisamente el retardo y/o mora, independiente de que la
clusula se encuentre redactada en trminos facultativos o imperativos.
Bajo este raciocinio la Corte Suprema seala que el sentido de la clusula de aceleracin
es hacer exigible una obligacin que se paga en cuotas, por el slo hecho de la mora de
una de ellas, como si todo el crdito fuere exigible, aunque no se haya producido la mora
de las restantes parcialidades, y este es el derecho que le asiste al acreedor, el de poder
cobrar un total o un saldo insoluto de una obligacin, en el solo evento de la mora de una
de las cuotas en que se dividi el crdito, cualquiera sea el sentido facultativo o
imperativo en que se haya redactado la clusula en discusin.34
Esta, que podramos llamar nueva corriente, difiere de aquella en donde lo que domina es
la intencin de los contratantes, y extrae de la naturaleza de la clusula de aceleracin, un
factor comn que provoca, sin excepcin, su acaecimiento, esto es, el incumplimiento por
parte del deudor. La virtud de esta interpretacin, es eliminar la incertidumbre sobre el
momento en que opera la clusula de aceleracin, sobre todo teniendo en cuenta que
incluso en sentencias que interpretan clusulas redactadas en trminos muy similares, la
interpretacin del juez ha sido diversa sobre el carcter de facultativa o imperativa de la
misma. Pero por otra parte, restringe la autonoma de la voluntad, principio formador del
Derecho Civil y fuente de la clusula de aceleracin como caducidad convencional del
plazo, sin que exista un sustento legal que la justifique.
33
Aguad Deik, Alejandra, Clusula de aceleracin y prescripcin de la accin ejecutiva. Teora de los actos propios en
Jurisprudencia Civil Comentada. Santiago. Legal Publishing Chile, 1 ed. 2011. p. 64.
34
C. Suprema, 6 mayo 2009. F.del M. N 346, p. 82. M.J. N 19941.
17
18
cualquiera sea la forma en que se intente la exigencia del cumplimiento, tanto judicial,
como extrajudicialmente. Puede tambin oponerse ya sea se intente el cumplimiento
forzado de la obligacin, indemnizacin de los perjuicios, o de resolucin, pese a que el
Cdigo Civil slo lo dispuso expresamente respecto a la segunda.
En apoyo de lo anterior, otras legislaciones como la francesa, han desarrollado una
aplicacin tambin amplia de este principio, pese a tener un fundamento legal mucho ms
restrictivo. El artculo 1612 del Cdigo Civil francs que da derecho al vendedor a negarse
a entregar lo vendido si el comprador no le paga el precio, reproducido con algunas
variantes en nuestro Cdigo en su artculo 1826, ha servido de fundamento legal para la
amplia aplicacin de este principio en ese pas. Con mayor razn en nuestro pas, en
donde existe un precepto ms general, aunque ceido solamente a la mora, se ha
aplicado ampliamente.39
Requisitos para que opere.
1 Se aplica en los contratos Bilaterales. Esto, en virtud de lo expresamente establecido
en el artculo 1552 del Cdigo. El autor Luis Claro Solar al respecto indica que por
consiguiente, para que tenga cabida la excepcin de inejecucin se requiere en primer
lugar que exista entre las partes una relacin sinalagmtica obligatoria, en que la parte
perseguida sea efectivamente deudora de una prestacin emanada de esta relacin y al
mismo tiempo acreedora de una contraprestacin no efectuada aun por la otra parte. El
cdigo se refiere expresamente a los contratos bilaterales; y por lo mismo, a los llamados
38
Alessandri Rodrguez, Arturo. De la Compraventa y de la Promesa de Venta, tomo II, vol. 1. Santiago. Jurdica, 2003. p
348.
39
Ruz Lrtiga, Gonzalo. op. cit. p. 331.
19
41
Esta
40
Claro Solar, Luis. Explicaciones de Derecho Civil Chileno y Comparado, Volumen V. De las Obligaciones. Santiago.
Jurdica. 3 ed. 1939, p. 788.
41
C. Talca, 25 agosto 1931. G. 1931, 1er sem., N75, p.351., t.30, sec.2, p.1.
42
Abeliuk, Ren. op. cit. p. 774; C. Suprema, 29 Septiembre 2009. M.J. N21624; C. Santiago, 21 septiembre 2009. M.J. N
21690; C. Suprema, 19 agosto 2009. G.J. N350, p.76. M.J. N20002.
43
C. Suprema, 26 agosto 1950. R., t. 48, sec 1, p. 479; C. Suprema, 9 julio 1952. R, t. 49, sec. 1, p.237.
20
Las partes son las que establecen el contenido y efecto de las obligaciones derivadas del
contrato, pudiendo dejarlas sin efecto o modificarlas, siendo las normas legales de
aplicacin supletoria. De tal manera que a travs del incumplimiento reciproco las partes
pueden dejar sin efecto las obligaciones emanadas de un contrato.
El estar llano a cumplir la obligacin no quiere decir que baste slo con manifestar la
buena disposicin a cumplir, sino que debe existir un principio de ejecucin. A modo de
ejemplo la Corte de Apelaciones de Santiago, en fallo de septiembre de 1964 estableci
que para no incurrir en mora no se precisa el cumplimiento perfecto de la obligacin
contrada, sino que es suficiente allanarse a cumplir en la forma y tiempo debidos. En este
caso est el promitente comprador que deposita en poder de un notario la suma
correspondiente a la segunda cuota del precio, con la especfica finalidad de cumplir la
obligacin indicada y en la fecha expresada en el contrato para efectuar el pago
cuestionado.44
Por otra parte se presenta la dificultad de determinar qu tipo de incumplimiento del
acreedor es el que puede llevar al deudor a utilizar la excepcin de contrato no cumplido
para excusarse del cumplimento de sus obligaciones correlativas. Esto se relaciona con la
aplicacin de la condicin resolutoria tcita contenida en el artculo 1489 del Cdigo, en
donde se discute si su aplicacin puede impetrarse ante cualquier tipo de incumplimiento,
incluso aquellos accesorios o de poca monta, o si el incumplimiento debe tratarse
precisamente de la contraprestacin reciproca que constituye la esencia del contrato.
Siguiendo al autor Abeliuk, al ser las consecuencias del incumplimiento menos graves en
el caso de la excepcin de contrato no cumplido, bastara con cualquier tipo de
incumplimiento, bastndole al acreedor con cumplir para poder hacer exigible la contra
prestacin. Cualquier exceso en que pudiera caer el deudor se corregira a travs de la
exigencia de la buena fe. Sin embargo reconoce que la jurisprudencia es contradictoria al
respecto.45 As por ejemplo la Corte Suprema en fallo de 7 de mayo de 1985, estableci
que si el ejecutado alega como incumplidas obligaciones accidentales materia del
contrato de la demanda, no podran tener el efecto que contempla el citado artculo 1552,
a menos que las partes lo hubieran pactado expresamente. 46
44
21
El profesor Gonzalo Ruz, recoge la posicin del profesor Abeliuk, sealando que en este
caso basta cualquier incumplimiento, dado que la sancin no es tan drstica, bastndole
al acreedor cumplir para poder exigir lo mismo del deudor. 47
3 La obligacin del acreedor en contra de quien se opone la excepcin debe ser
actualmente exigible. Este requisito es de toda lgica, ya que de lo contrario podra el
deudor forzar al acreedor a cumplir su obligacin con anterioridad a que esta devengue.
As lo seala de forma expresa tambin, el artculo 1826 inc. 3 del Cdigo, respecto a la
compra venta.
4 El que opone la excepcin debe encontrarse de buena fe. Este requisito lo agrega el
autor Ren Abeliuk, pese a que no lo encontramos en la norma del artculo 1552 del
Cdigo. Sin embargo, siendo la excepcin de contrato no cumplido una expresin del
principio de buena fe, resulta necesario exigir que aquel que pretende su aplicacin deba
encontrarse, precisamente, actuando de buena fe. De esta forma se impide que el deudor
retarde injustificadamente el cumplimiento en casos de incumplimientos de poca monta o
accesorios o inimputables al acreedor.
2.- La excepcin de contrato no cumplido y la resolucin del contrato.
Jurisprudencia durante el ao 2009.
Esta ha sido una de las materias ms controvertidas respecto a la aplicacin de la
excepcin de contrato no cumplido Es posible que uno de las partes, ante el
incumplimiento conjunto, pueda resolver el contrato?
El punto de tope en esta materia es el requisito de la mora como condicin para que
opere la resolucin por incumplimiento de un contrato (entendiendo mora como retardo
imputable en el cumplimiento de una obligacin, seguida de interpelacin), cuestin que
requiere que aqul que intenta la accin resolutoria haya cumplido su parte o est llano a
cumplirla, y que adems le atribuye a la resolucin, un carcter sancionador de la ilicitud o
mala fe en el actuar.48
En la lnea de establecer la mora, y por consiguiente la culpa, como condicin sine qua
non para que opere la resolucin de un contrato por incumplimiento, Alessandri
47
48
22
Rodrguez, rechaza la resolucin ante ausencia de culpa, ya que para l No hay razn
para que un contratante que no tiene culpa alguna sufra la resolucin. La clusula
resolutoria tcita ha sido contemplada por el legislador como una garanta dada al
acreedor contra el mal proceder del deudor.
49
23
que cada parte ha contratado bajo una presuposicin real, efectiva, de que su contraparte
habr de cumplir con su obligacin, y as aqulla podr obtener la ventaja que se propuso
y en consideracin de la cual consinti en obligarse. Ahora bien, si la contraparte no
cumple, esta presupuesto del contrato, falla, y es por esto que la ley autoriza para pedir la
resolucin. Este sera el fundamento efectivo del artculo 1489. Ahora bien, este
fundamento es igualmente aplicable al caso del incumplimiento recproco. En efecto, el
hecho de que el demandante no haya cumplido sus obligaciones no obsta a que
igualmente en este caso falle el presupuesto de su consentimiento, ya que l se oblig por
la consideracin del cumplimiento de su contraparte, y, fallando el supuesto del contrato,
procede la resolucin del mismo. Existiendo la misma razn fallar el presupuesto de la
determinacin de la voluntad de contratar- , debe existir la misma disposicin, posibilidad
de impetrar la resolucin del contrato. 55
Si seguimos al autor Ren Abeliuk, este nos dice que la excepcin de contrato no
cumplido tiene una finalidad meramente paralizadora, mediante ella el deudor impide que
se le fuerce a cumplir mientras su contraparte no lo haga a su vez(..), opuesta la
excepcin, si ninguna de las partes cede y da comienzo al cumplimiento de la obligacin
propia, la excepcin conduce a un punto muerto. El contrato Bilateral queda en
suspenso56. En fallo de 29 de septiembre de 2009 la Corte Suprema seala, citando al
autor Abeliuk, que pude ocurrir que ninguna de las pates quiera cumplir, en cuyo caso si
no lo hacen de comn acuerdo no hay solucin legal para poner trmino al contrato, que
quedar en el aire hasta que alguna de las partes se decida a cumplir o se venzan los
plazos de prescripcin.57 Sin embargo, resulta contradictorio el sustento del fallo en el
autor Abeliuk, ya que el propio autor reconoce y acepta que, dando solucin judicial a la
laguna legislativa en aquellos casos en que opuesta la excepcin, ninguna de las partes
cede dando cumplimiento a sus obligaciones, la Corte Suprema ha aceptado en tales
casos la resolucin de contrato, sin indemnizacin de perjuicios.58
As, durante la investigacin de esta Memoria de Licenciatura, en dos fallos del ao 2009,
la Corte Suprema y de Apelaciones de Santiago en fallo confirmado posteriormente por
la Corte Suprema-, fijan el criterio descrito en el prrafo anterior. Este sera el apoyo
55
Elgueta Ortiz, Augusto. La resolucin por el incumplimiento recproco: (Estudio de un caso de interpretacin del art. 1489
del Cdigo Civil y una integracin de la laguna legal mediante el procedimiento por analoga): Memoria de prueba. Santiago.
1947. p. 103 y sig.
56
Abeliuk, Ren. op. cit. p. 779.
57
C. Suprema, 29 de septiembre 2009. M.J. N 21624.
58
Abeliuk, Ren. op. cit. p. 780.
24
jurisprudencial, hacia lo que Tarek Ysari describe como el abandono progresivo, por
parte de la doctrina, de la idea de resolucin como una sancin frente a un incumplimiento
reprochable, abriendo camino a una concepcin de resolucin desde la perspectiva del
acreedor insatisfecho, como medio de proteccin de su inters.59
En el primero de ellos, de fecha 19 de agosto de 2009, la Corte Suprema reconoce la
inexistencia de precepto alguno que resuelva la cuestin de si uno de los contratantes que
no ha cumplido las obligaciones contradas puede o no solicitar la resolucin de la
promesa de venta en contra de la otra parte que tampoco ha dado cumplimiento a las
suyas. En este caso, contina el fallo, los jueces estn en el deber de juzgarla del modo
que ms conforme parezca al espritu general de la legislacin y a la equidad natural de
acuerdo con lo preceptuado en el N5 del artculo 170 del Cdigo de Procedimiento Civil.
En efecto no parece justo ni equitativo dejar a las partes ligadas por un contrato que
ambas no quieren cumplir y que de hecho aparece as ineficaz por voluntad de las
mismas. Luego no pugna, por lo tanto, con la ndole y naturaleza de los principios
jurdicos que informan la accin resolutoria que ella se acoja a este caso, porque la
resolucin, es precisamente el medio que la ley otorga para romper un contrato que naci
a la vida del derecho, pero que no est llamado a producir sus naturales consecuencias
en razn de que las partes se niegan a respetarlo y todava, porque acogindola se llega
a la realidad propia de toda resolucin, cual es que las cosas puedan restituirse al estado
anterior, como si el contrato no hubiese existido.60
El segundo de los fallos, la Corte de Apelaciones de Santiago, en el mismo sentido indica
que el principio que subyace en el artculo 1489 del Cdigo Civil es el mismo que
consagra el artculo 1552 y cuya base tal como se dijo brota del principio de buena fe
consagrado por el artculo 1546. 61
Esta solucin jurisprudencial ha debido limitar, necesariamente la aplicacin del artculo
1489 a los casos en que se ejerza la excepcin de contrato no cumplido. Como sabemos,
la condicin resolutoria tacita del artculo 1489 trae aparejada la indemnizacin de
perjuicios por parte del contratante diligente.
En el caso de la excepcin de contrato no cumplido, al no existir una parte diligente, que
haya cumplido sus obligaciones emanadas del contrato, no parecera justo que aquel que
59
25
impetre la excepcin y solicite a su vez la resolucin del contrato, pudiera adems solicitar
se le indemnicen los perjuicios sufridos.
Como respuesta a esto, en tales casos, la Corte Suprema ha aceptado la resolucin del
contrato sin indemnizacin de perjuicios. As, no procede la indemnizacin de perjuicios
pues ella requiere de mora y en este caso no podra existir para ninguna de las partes de
conformidad con lo dispuesto en el artculo 1552 del Cdigo.62
De esta forma la jurisprudencia, ha venido a salvar esta laguna legislativa, aceptando la
aplicacin de la accin resolutoria en los casos en que se impetre la excepcin de
contrato no cumplido descrita en el artculo 1552 del Cdigo, sin que esto de lugar para
solicitar la indemnizacin de perjuicios que prescribe el artculo 1489.
Por ltimo, y refirindose precisamente al fallo citado de la Corte Suprema, de fecha 19 de
agosto de 2009, es necesario mencionar la crtica que hizo el profesor Carlos Pizarro.
Para l, El razonamiento es seductor, pero no completo. Si bien cabe compartir la
doctrina de restringir los efectos de la excepcin de contrato no cumplido a restringir la
indemnizacin de daos, dicha limitacin emana del artculo 1557 y debe entenderse
referida nada ms a los perjuicios derivados de la mora o moratorios o por el retardo, sin
que pueda alcanzar otros perjuicios diversos a aqullos. Adems, cabe considerar que la
sentencia no resolvi en forma correcta la restitucin del avance del precio que constituye
un efecto de la resolucin y no una indemnizacin de perjuicios. En consecuencia, debi
procederse a la restitucin del pago parcial del precio no a ttulo de indemnizacin de
perjuicios, sino como efecto natural retroactivo de la resolucin del contrato. La frontera
entre la restitucin y la indemnizacin no ha sido an bien demarcada ni por la doctrina ni
tampoco por la jurisprudencia. Una tarea pendiente. 63
62
63
26
C) Lesin Enorme
1.- Cuestiones Generales.
Concepto.
Como concepto general en el derecho el autor Arturo Alessandri Besa, seala que la
lesin es el perjuicio experimentado por una persona como consecuencia de un acto
jurdico ejecutado por ella; consiste, ms precisamente en los contratos a ttulo oneroso,
en el hecho de recibir una prestacin de un valor inferior a la que l proporciona64. La
lesin es en definitiva una desigualdad entre las prestaciones que atenta en contra de la
equidad en las relaciones jurdicas, acarreando perjuicios.
Naturaleza Jurdica.
Nuestro Cdigo civil considera la lesin como un vicio objetivo de determinados contratos,
derivado de la desproporcin econmica de las prestaciones de las partes que se traduce
en perjuicio para una de ellas, autorizando la rescisin del mismo. De tal manera, no se
trata de un vicio del consentimiento, sino de un vicio objetivo de aplicacin limitada a los
pocos casos en que la ley la admite expresamente. Este carcter objetivo podemos
observarlo en la indiferencia que existe en su aplicacin, de si el actor que sufre el
perjuicio lo hizo o no con conocimiento de la desproporcin entre las prestaciones.
El criterio objetivo recogido por nuestra legislacin se debe, siguiendo al autor Alessandri
Rodrguez, a la influencia en nuestro Cdigo del Cdigo Civil francs, que en su art. 1118
indica que la lesin no vicia las convenciones sino que en algunos contratos o respecto
de algunas personas. Agrega el citado autor a este respecto, basndose en Planiol y
Ripert, que El criterio observado por el Cdigo francs se explica fcilmente: una su
integridad y que haca descansar en la libre concurrencia y en la iniciativa individual el
progreso social y la economa toda, no poda admitir la lesin sino por excepcin. Siendo
el valor de las cosas esencialmente relativo y variable y siendo cada uno libre de contratar
como mejor le plazca, autorizar la rescisin de los contratos por lesin era atentar contra
la libertad y contra la seguridad contractual.65
Por este motivo, el Cdigo no consider a la lesin dentro de las causas de vicios del
consentimiento del artculo 1554. De la misma forma, la sancin a la lesin no se
64
65
Alessandri B., Arturo. La Nulidad y la Recisin en el Derecho Civil Chileno. Santiago. Jurdica, 3 ed. 2001. p. 72
Alessandri Rodrguez, Arturo. De Los Contratos. Santiago. Jurdica, 1 ed. 2004. p. 207.
27
66
Alessandri Rodrguez, Arturo. De la Compraventa y de la Promesa de Venta, tomo II, vol. 2. Santiago. Jurdica. 2003. p.
741.
Alessandri Rodrguez, Arturo. op.cit. p. 208.
68
Alessandri Rodrguez, Arturo. op.cit. p. 210.
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28
como error en la magnitud de las prestaciones69, teora cuya exposicin excede con
creces el marco de esta monografa.
Casos en que nuestro Cdigo acepta la aplicacin de la lesin.
i. Compraventa voluntaria de Bienes Races. El artculo 1888 del Cdigo dispone: El
contrato de compraventa podr rescindirse por lesin enorme.
Agrega el artculo 1889 del Cdigo que el vendedor sufre lesin enorme cuando el precio
que recibe es inferior a la mitad del justo precio de la cosa que vende; el comprador, a su
vez, sufre lesin enorme cuando el justo precio de la cosa que compra es inferior a la
mitad del precio que paga por ella. El justo precio se refiere al tiempo del contrato.
Por su parte el artculo 1891 del Cdigo limita la aplicacin de la lesin dentro del contrato
de compraventa diciendo que no habr lugar a la accin rescisoria por lesin enorme en
las ventas de bienes muebles, ni en las que se hubieren hecho por el ministerio de la
justicia.
Respecto de los inmuebles, el artculo 170 del Cdigo de Minera, excluye a las
concesiones mineras, haciendo inaplicable la lesin en los contratos de compraventa y de
permuta de una concesin o de una cuota o una parte material de ella.
Requisitos de la lesin enorme en la compraventa:
De acuerdo al autor Ral Diez Duarte70, los requisitos para que opere la lesin en la
compraventa son los siguientes:
a.- Que la compraventa sea susceptible de rescindirse por causa de lesin;
Como vimos, slo se aplica a la compraventa voluntaria de bienes races, excluyendo las
concesiones mineras.
b.- Que la lesin tenga el carcter de enorme;
El artculo 1889 del Cdigo, ya citado, seala que El vendedor sufre lesin enorme,
cuando el precio que recibe es inferior a la mitad del justo precio de la cosa que vende; y
el comprador a su vez sufre lesin enorme, cuando el justo precio de la casa que compra
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es inferior a la mitad del predio que paga por ella. Agrega en su inciso segundo el justo
precio se refiere al tiempo de celebracin del contrato.
Determinar el justo precio es por tanto una cuestin objetiva, de hecho, que debe
considerarse al tiempo de celebracin del contrato. Al ser una cuestin de hecho, es una
cuestin de prueba, sobre la cual se pueden emplear todos los medios de prueba que ha
establecido la ley.
c.- Que la cosa no haya perecido por caso fortuito en poder del comprador;
De acuerdo al artculo 1893 del Cdigo Perdida la cosa en poder del comprador no habr
derecho por una ni por otra parte para la rescisin del contrato.
Esta prdida debe ser fortuita. Si la cosa se pierde por culpa del comprador, tendr
entonces derecho el vendedor al valor de la cosa e indemnizacin de perjuicios de
acuerdo al artculo 1672 del Cdigo.
d.- Que la cosa no haya sido enajenada por el comprador;
El inciso segundo del artculo 1893 del Cdigo en primer lugar seala que no tendr
derecho el vendedor a la rescisin por lesin enorme si el comprador hubiese enajenado
la cosa, y luego agrega salvo que la haya vendido por ms de lo que haba pagado por
ella; pues en tal caso podr el vendedor reclamar este exceso, pero slo hasta
concurrencia del justo valor de la cosa, con deduccin de una dcima parte.
De esta forma la lesin no entrega accin en contra de terceros adquirentes ya que se
presume que estos se encuentran siempre de buena fe.
e.- Que la accin rescisoria se entable oportunamente.
El mismo artculo 1893 del Cdigo establece una prescripcin de corto tiempo a la accin
rescisoria por lesin enorme de cuatro aos. Se ha entendido por la jurisprudencia que
dicha plazo de prescripcin comienza a correr desde la celebracin del contrato, y no
desde la inscripcin en el Registro Conservatorio de Bienes Races, ya que una cosa es el
contrato y la otra el modo de adquirir.
ii. Permuta. El artculo 1900 del Cdigo dice que las disposiciones relativas a la
compraventa se aplicarn a la permutacin en todo lo que no se oponga a la naturaleza
de este contrato; cada permutante ser considerado como vendedor de la cosa que da, y
30
el justo precio de la cosa que da, y el justo precio de ella a la fecha del contrato se mirar
como el precio que paga por lo que recibe en cambio. La aplicacin de la lesin en la
permuta es discutida en uno de los fallos que trataremos ms adelante.
iii. El mutuo y la anticresis. Los artculos 2206 y 2443 del Cdigo y la ley N18.010 de 27
de junio de 1981, establecen la lesin como sancin al establecimiento de intereses
excesivos, siendo la sancin diversa a el caso de la compraventa, debiendo ser rebajados
dichos intereses.
iv. Asignacin por causa de muerte. Conforme al artculo 1234, una vez hecha con los
requisitos legales, no podr rescindirse, sino en el caso de haber sido obtenida por fuerza
o dolo, y en el de lesin grave, a virtud de disposiciones testamentarias que no se tena
notica al tiempo de aceptarla () Se entiende por lesin grave la que disminuyere el valor
total de la asignacin en ms de la mitad.
v. La particin de bienes. De acuerdo a lo prescrito por el artculo 1348 del Cdigo, las
particiones se anulan o se rescinden de la misma manera segn las mismas reglas que
los contratos, agregando en su artculo 2 que la rescisin por causa de lesin se
concede al que ha sido perjudicado en ms de la mitad de su cuota.
2.- Lesin Enorme. Jurisprudencia durante el ao 2009.
a. Prueba de la Lesin.
El vendedor que pretende impetrar la rescisin por lesin enorme, en virtud del artculo
1889 del Cdigo, debe acreditar dos cosas: a) El justo precio de la cosa al momento del
contrato; b) Que el precio pactado es inferior a la mitad del justo precio. Al ser el justo
precio una cuestin de prueba, la jurisprudencia ha declarado la improcedencia del
recurso de casacin en el fondo respecto de la determinacin del mismo.71
El medio de prueba ms utilizado en este tipo de casos, es el avalo del bien raz por
parte de peritos. En relacin a este medio de prueba, la Corte Suprema en fallo de 9 de
enero de 2009, dispuso que en caso de existir informes periciales, valorados por el
Tribunal con la latitud de que est legalmente investido, dadas las imprecisiones
advertidas, relacionadas con aspectos eminentemente tcnicos, propios de la ciencia del
perito, no reviste el mrito probatorio suficiente para conducir, mediante su sometimiento
71
C. Suprema, 27 diciembre 1912. R., t.11, sec.1, p.118; C. Suprema, 21 septiembre 1943. Jurisp. al Da, ao XV, p.305
(C.2, p.307); C. Suprema, 25 agosto 1949, 2 sem., N15, p.79. R., t.46, sec.1, p.780.
31
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objeto de deducir el justo precio del inmueble del avalo de su renta, no es una prueba
positiva sino inductiva y sujeta a apreciaciones ms o menos aventuradas, que no
permiten por consiguiente establecer con toda exactitud los hechos consagrados como
cardinales por el artculo 1889. Independientemente de esta circunstancia, el rol de
contribuyentes no es como elemento de prueba en juicio un documento de tal naturaleza
que tenga fuerza de una escritura pblica, ni reposa en declaraciones juradas, prestadas
en el mismo juicio por los individuos que han formado la comisin avaluadora.
En fallo de 8 de septiembre de 2009, la Corte Suprema se refiere a la prueba del justo
precio y en concreto al avalo fiscal como medio de prueba, tras un anlisis completo de
la aplicacin de la tasacin fiscal en distintos casos de nuestra legislacin. Luego de este
anlisis el mximo tribunal concluye que el justo precio debe ser establecido en concreto,
pero conforme a ciertos parmetros subjetivos, respetando circunstancias de tiempo y
espacio, a la fecha del contrato. Como consecuencia constituye un antecedente relevante
para los efectos de precisar el justo precio la Ley 17.235 que establece el impuesto
territorial, cuyo objeto es gravar los bienes races con una contribucin a favor del erario
nacional, en que la tasacin la efecta el Servicio de Impuestos Internos bajo parmetros
objetivos y que se mantiene en forma actualizada, en que es el propio contribuyente quien
puede participar en ella presentando una declaracin descriptiva del inmueble e incluso
reclamar posteriormente del avalo, segn lo regula el artculo 149 y siguientes del
Cdigo Tributario. 74
impuesto, esta investido de una rigurosidad tal que le permite al legislador utilizarlo en
diferentes materias, como por ejemplo en el art. 20, letra b) de la Ley de Impuesto a la
Renta para el clculo de la renta presunta, como tambin en el art. 486 del Cdigo de
Procedimiento Civil, para los efectos de tasar y vender en pblica subasta una propiedad,
y en el art. 46 de la Ley 16.271, sobre Impuesto a las Herencias, Asignaciones y
Donaciones, como elemento para la base de su clculo.
Finalmente concluye la Corte que Estos antecedentes legislativos resultan suficientes
para determinar que , ante la ausencia de otros elementos de juicios relevantes y que
otorguen certeza sobre el valor de la propiedad, el avalo fiscal efectuado por el Servicio
de Impuestos Internos para el pago de las contribuciones de bienes races, representa el
justo precio de los inmuebles, en relacin al cual ha de efectuarse la comparacin del
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33
valor pagado realmente, con el objeto de calificar la existencia de una lesin inferida al
vendedor. 75
b. Ventas sujetas a rescisin y ventas que escapan a ella.
i. Venta de derechos hereditarios.
La venta de derechos hereditarios, o cesin de derechos hereditarios, ha sido
considerada por la jurisprudencia, generalmente, como una venta ajena a la aplicacin de
la rescisin por lesin enorme. Las razones que se dan son las siguientes: a) dicha
cesin no es una venta de bienes races; b) el que cede un derecho de herencia a ttulo
oneroso sin especificar los efectos de que se compone slo responde de su calidad de
heredero, y c) no es posible determinar el valor del derecho cedido a la fecha del contrato,
pues la cuanta de las cargas y obligaciones que afectan a aquel derecho depende de una
liquidacin futura.76
Alessandri Rodrguez hace una distincin en la aplicacin de la lesin enorme respecto a
la cesin de derechos hereditarios, posicin que refuerza en base a jurisprudencia. Para
l cuando lo que se vende es un derecho de herencia sin especificar los efectos de que se
compone, no procede la accin de lesin enorme ya que el vendedor slo confiere al
comprador un derecho para tener participacin en los bienes hereditarios, pero no un
derecho a tales o cuales bienes determinados y no podra conferrselo de ninguna
manera, puesto que no se sabe a cunto asciende la cuota cedida. No se conoce, por
tanto, el valor que tiene el derecho que se cede, faltando as el trmino de comparacin
llamado justo precio, lo que hace imposible determinar si hay o no lesin enorme. Por el
contrario, s se aplica la lesin enorme cuando lo que se vende es una porcin
determinada de una de las cosas que constituyen la herencia, pues entonces no hay
propiamente venta de derechos hereditarios, sino de un cuerpo cierto, cuyo valor puede
determinarse perfectamente as como cuando en la venta se especifica y determinan los
bienes que se ceden, o cuando esta recae sobre inmuebles proindivisos que han sido
adjudicados al vendedor antes de la venta.77
As como Alessandri Rodrguez, la jurisprudencia, distingue entre la cesin de derechos
hereditarios, y aquella compraventa en donde se especifican los bienes races que
75
34
78
Repertorio de Legislacin y Jurisprudencia Chilenas, Cdigo Civil y Leyes Complementarias Tomo VII. 3ed. Santiago.
Jurdica, 1997. p.404.
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79
36
84
37
87
88
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BIBLIOGRAFA
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448p.
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40
ARTCULO 1437: Las obligaciones nacen, ya del concurso real de las voluntades de dos
o ms personas, como los contratos o convenciones; ya de un hecho voluntario de la
persona que se obliga, como en la aceptacin de una herencia o legado y en todos los
cuasicontratos; ya a consecuencia de un hecho que ha inferido injuria o dao a otra
persona, como en los delitos y cuasidelitos; ya por disposicin de la ley, como entre los
padres y los hijos sujetos a patria potestad.
La apariencia de voluntad como fuente de responsabilidad. i) El hecho de haberse
encontrado un trabajador de la demandada en el lugar en que se sita la propiedad que
se prometa enajenar, con la documentacin correspondiente a la demandada y
realizando labores para sta como jefe zonal, quien precisamente compareci en la
suscripcin de los documentos, adems, sumado lo anterior al hecho de haberse llevado
a cabo el mismo da una operacin similar, en la cual ese empleado de la demandada,
suscribi -en idnticas condiciones- un contrato anlogo con un tercero a nombre de la
empresa demandada, recibiendo, tambin, los dineros por el tercero entregados en tal
oportunidad, actuar ste que luego fue aceptado y avalado por dicha sociedad, toda vez
que aqulla, en cumplimiento de esta ltima promesa, firm el contrato definitivo, sin que
se haya desconocido que el obrar de su trabajador la obligaba.
Lo reseado haca verosmil que el acto al cual estaba concurriendo el actor era correcto
y otorgaba a l una apariencia de legitimidad, que un tercero de buena fe dificultosamente
pudo poner en duda.
C. Suprema, 13 Agosto 2009. M.J. N 20092 (C.31)
ii) En las manifestaciones de la vida jurdica, al igual que en otros dominios, no siempre la
realidad concuerda con las apariencias. Frente a la dualidad de apariencia y realidad
surge el deseo de proteger a los terceros. Las apariencias merecen fe, por cuanto resulta
difcil precisar si ellas corresponden o no a la realidad. Es as que cuando el inters de los
terceros de buena fe lo hace necesario, los jueces no deben considerar totalmente
ineficaz un acto ejecutado por quien se ha comportado como titular verdadero del derecho
y lo hace oponible al titular real.
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ARTCULO 1441. El contrato oneroso es conmutativo, cuando cada una de las partes se
obliga a dar o hacer una cosa que se mira como equivalente a lo que la otra parte debe
dar o hacer a su vez; y si el equivalente consiste en una contingencia incierta de ganancia
o prdida, se llama aleatorio.
Lesin enorme en los contratos onerosos conmutativos. En los contratos bilaterales
que por el hecho de ser, adems, conmutativos, causa y objeto deben ser equivalentes,
esto es de una entidad similar, objetivamente apreciadas.
La lesin se produce cuando las prestaciones no permiten ser calificadas como
equivalentes. Esta lesin permite ser calificada de enorme por parte del vendedor,
"cuando el precio que recibe es inferior a la mitad del justo precio de la cosa que vende"
(art. 1889 del Cdigo Civil). El justo precio debe ser establecido en concreto, pero
conforme a parmetros objetivos, conforme a cierta opinin comn y generalmente
aceptada, respetando las circunstancias de tiempo y espacio, esto es, a la fecha del
contrato y respecto de la propiedad.
C. Suprema, 08 septiembre 2009. G.J. N 351, p.80. M.J. N 21362 (Sent. de reemplazo
C.10, p.88)
ARTCULO 1442: El contrato es principal cuando subsiste por s mismo sin necesidad de
otra convencin, y accesorio, cuando tiene por objeto asegurar el cumplimiento de una
obligacin principal, de manera que no pueda subsistir sin ella.
Hipoteca. Extincin de la obligacin accesoria e interrupcin de la prescripcin. Dos
de las caractersticas principales del contrato de hipoteca: constituye una caucin, esto
es, una obligacin que se contrae para las seguridad de otra obligacin, propia o ajena
(artculo 46 del Cdigo Civil) y es un contrato accesorio, es decir, necesita de otra
convencin principal a la cual acceder para subsistir (artculo 1442 de ese texto
normativo).
Que en razn, precisamente, de la accesoriedad anotada, es que el artculo 2434 del
Cdigo Civil, al referirse a la extincin de la hipoteca, dispone en su inciso 1 que sta se
extingue junto con la obligacin principal. Lo antes dicho se aplica a todos los modos de
extinguirse las obligaciones que consagra el artculo 1567 del Cdigo Civil, entre ellos, la
prescripcin liberatoria. En efecto, el artculo 2516 del mismo Cdigo precepta que la
accin hipotecaria, y las dems que proceden de una obligacin accesoria, prescriben
43
junto con la obligacin a que acceden. En consecuencia, el nico modo para que la accin
que emana del contrato de hipoteca se extinga por prescripcin consiste en que se
extinga por esta va la accin que nace de la obligacin cuyo cumplimiento la hipoteca
cauciona.
La afirmacin anterior conduce necesariamente a sostener que todas las circunstancias
que afectan el transcurso o el cmputo del trmino de prescripcin de la obligacin
principal, afectarn tambin el curso de prescripcin de la accin hipotecaria.
As, la interrupcin de la prescripcin que opera respecto de la obligacin principal
garantizada con la hipoteca, interrumpe tambin la de la obligacin hipotecaria, accesoria
de la primera.
No puede sino afirmarse que la notificacin de la demanda en el proceso en que el
acreedor dirigi la accin de cobro -que es la que emana de la obligacin principal- contra
el deudor personal, adems de interrumpir la prescripcin de esa accin, hizo lo propio
con la de la accin hipotecaria, pues, de estimarse lo contrario, resultara imaginable que
mientras la prescripcin de la accin emanada de la obligacin principal, caucionada con
la hipoteca, ha sido interrumpida, la de la accin hipotecaria sigue su curso y puede
eventualmente llegar a cumplirse, extinguindose por esta va. Lo anterior no puede
aceptarse, pues importa negar las caractersticas que, segn se dijo en el fundamento
sexto de este fallo, constituyen parte de la esencia de la hipoteca.
En efecto, si se aceptara que la accin hipotecaria pudiera prescribir con prescindencia de
la accin que nace de la obligacin que se supone garantiza, la hipoteca dejara de ser,
precisamente, una garanta y se le atribuira una autonoma impropia, soslayando su
carcter de accesoria.
C. Suprema, 05 noviembre 2009. M.J. N 22230 (C.6, C.7 y C.8)
Prescripcin de las acciones que provengan de una obligacin accesoria. El nico
modo para la accin que emana del contrato de hipoteca se extinga por prescripcin
consiste en que se extinga por esta va la accin que nace de la obligacin cuyo
cumplimiento la hipoteca cauciona.
C. Suprema, 01 junio 2009. M.J. N 20228 (C.4)
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Artculo 103: Cuando los deudores no hubieren satisfecho las cuotas o dividendos en el plazo estipulado y requeridos
judicialmente no los pagaren en el trmino de diez das, el juez decretar, a peticin del banco, el remate del inmueble
hipotecado o su entrega en prenda pretoria al banco acreedor.
El deudor podr oponerse, dentro del plazo de cinco das al remate o a la entrega en prenda pretoria. Su
oposicin slo ser admisible cuando se funde en alguna de las siguientes excepciones:
1) Pago de la deuda;
2) Prescripcin;
3) No empecer el ttulo al ejecutado.
En virtud de esta ltima excepcin no podr discutirse la existencia de la obligacin hipotecaria, y para que sea
admitida a tramitacin deber fundarse en algn antecedente escrito y aparecer revestida de fundamento plausible. Si no
concurrieren estos requisitos, el tribunal la desechar de plano.
La oposicin se tramitar como incidente.
La apelacin de las resoluciones que se dicten en contra del demandado en este procedimiento se conceder en
el solo efecto devolutivo. El tribunal de alzada podr decretar a peticin de parte, la suspensin del cumplimiento de la
sentencia del tribunal de primera instancia mientras se encuentre pendiente la apelacin si existieren razones fundadas
para ello, lo que resolver en cuenta.
Si no se formulare oposicin, o se hubiere desechado la formulada, se proceder al remate del inmueble
hipotecado o a su entrega en prenda pretoria al banco acreedor, segn corresponda.
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esta va. Lo anterior no puede aceptarse, pues importa negar caractersticas esenciales
de la hipoteca: constituye una caucin, esto es, una obligacin que se contrae para las
seguridad de otra obligacin, propia o ajena (artculo 46 del Cdigo Civil) y es un contrato
accesorio, es decir, necesita de otra convencin principal a la cual acceder para subsistir
(artculo 1442 de ese texto normativo).
C. Suprema, 31 agosto 2009. M.J. N 21332 (C.3, C.4 y C.5)
ARTCULO 1445: Para que una persona se obligue a otra por un acto o declaracin de
voluntad es necesario: 1 que sea legalmente capaz; 2 que consienta en dicho acto o
declaracin y su consentimiento no adolezca de vicio; 3 que recaiga sobre un objeto
lcito; 4 que tenga una causa lcita.
La capacidad legal de una persona consiste en poderse obligar por s misma, y sin el
ministerio o la autorizacin de otra.
A. EL CONSENTIMIENTO
Voluntad real y simulacin. Si en un contrato de compraventa la vendedora era una
persona de 76 aos; su salud estaba deteriorada, necesitaba el consumo de
antidepresivos, con cansancio y poco nimo, llanto fcil y debilidad emocional; si falleci
aproximadamente al ao y medio despus de celebrarse los contratos de compraventa
impugnados; si los compradores vivan con ella, siendo cuidada y representada por su
hija, cnyuge del comprador y madre de la otra compradora; si en ambas escrituras de
compraventa aparecen pagados los precios mediante cuotas sucesivas pagadas con
anterioridad al contrato, a entera satisfaccin de la vendedora; si una de las compradoras
Mabel Jimnez Acua seala que su ingreso mensual lquido era de $500.000 en
promedio, que comenz a pagar en febrero de 2000, lo que hace 32 cuotas hasta la fecha
de la compra, que lo fue por $10.000.000, lo que supone cuotas de $312.500 mensuales
promedio ya que dice que no fueron iguales, esto es, un 62,5% de su ingreso
declarado, monto que no es creble, porque la deja slo con $187.500 mensuales para
otros gastos, como movilizacin, colacin, vestuario, etc.; si el otro comprador tena una
renta lquida mensual promedio de $738.739, sin que haya acreditado fehacientemente
otros ingresos, a lo que estaba obligado, y aparece pagando un precio de $25.000.000,
sealando al absolver posiciones que comenz a pagar en 1998, lo que dara hasta la
fecha de la compra, 54 cuotas de $462.900 promedio mensual, lo que representa un
62,6% del ingreso acreditado, situacin tambin poco creble, en especial si se considera
46
su calidad de padre de familia con las responsabilidades propias de esa condicin; y que
no se cuenta con ningn antecedentes relativo a la recepcin ni al destino sea en
ocupacin o en depsito/ahorro de los dineros pagados a ttulo de precio; la voluntad
real de las partes en los contratos de compraventa referidos fue la de efectuar, la
vendedora, donaciones a los compradores, que lo fueron su yerno y su nieta.
Dichos contratos son nulos por la simulacin efectuada y por haberse omitido en ellos el
trmite de insinuacin. En consecuencia, los bienes de que se trata deben restituirse por
los demandados a la sucesin de la vendedora, en cuya masa hereditaria quedan
reincorporados.
Que no se rindi prueba tendiente a acreditar el dao moral demandado, por lo que se
desestimar este rubro.
C. Santiago, 02 noviembre 2009. G.J. N 353, p.107. L.P. N 42951 (C.3, C.4, C.5, p.
108 y C.6, p.109)90
El consentimiento en las ventas forzadas. Si bien de acuerdo a las reglas generales el
consentimiento debe lograrse para la celebracin de un contrato de compraventa ser
exento de vicios, libre y espontneo respecto de ambos contratantes, est regla dicha
mxima reconoce como tiene una excepcin , tal es el caso de las ventas forzadas
dispuestas por decreto judicial, en las que se ha entendido que el deudor otorg su
consentimiento de antemano, al contraer la obligacin y someterse al derecho de prenda
general sobre sus bienes a favor del acreedor, o bien, al colocarse en la situacin fctica
que la ley ha previsto como fuente de responsabilidad civil.
C. Suprema, 28 julio 2009. M.J. N 20721 (C.10)
Aceptacin de facultades entregadas al portador de escritura pblica. La clusula
por la cual se otorga facultades al portador de copia autorizada de una escritura para su
inscripcin, es una oferta de mandato a una persona en ese momento indeterminada pero
que se obligar, perfeccionando el contrato, al efectuar su aceptacin. Mal puede
considerarse configurado el mandato con la sola firma de la escritura pblica de
compraventa por el comprador, pues no se indic la persona del mandatario.
C. Concepcin, 21 abril 2009. M.J. N 20254 (C.4 y C.5)91
90
La parte vencida dedujo recurso de casacin en la forma pero no consign dinero para las compulsas dentro de plazo,
tenindosele por desistido.
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cree; como si por alguna de las partes se supone que el objeto es una barra de plata, y
realmente es una masa de algn otro metal semejante.
El error acerca de otra cualquiera calidad de la cosa no vicia el consentimiento de
los que contratan sino cuando esa calidad es el principal motivo de una de ellas para
contratar, y este motivo ha sido conocido de la otra parte.
Fuerza determinante, grave e injusta como vicio del consentimiento. Se ha dicho que
para que la fuerza vicie el consentimiento es menester que sea determinante, grave e
injusta.
Que la fuerza sea determinante implica que haya sido ejercida precisamente con el objeto
de obtener la declaracin de voluntad del demandante. Si el propio actor seala en su
demanda que su jefe y el abogado de la empresa "le pidieron la renuncia" por la denuncia
de acoso sexual que haba sido presentada en su contra, la fuerza no es determinante. l
pudo aceptar o rechazar dicha peticin y nunca estuvo en situacin tal que por la presin
93
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ejercida no haya tenido otra posibilidad que firmar su renuncia y, por cierto, aun
aceptando que le hayan dicho que la situacin iba a resultar incmoda para su novia
embarazada, ello tampoco implica una presin que necesariamente haya determinado al
actor a firmar su renuncia. Es indiferente para estos efectos si el actor estaba nervioso o
alterado, lo que realmente importa es saber si se ejerci sobre l una fuerza moral que lo
haya impelido a firmar el documento y la respuesta no puede ser sino negativa: siempre
estuvo en condiciones el demandante de no hacerlo, de no firmar.
Que la fuerza sea grave, tratndose de fuerza moral, significa que se debe amenazar con
un mal que produzca aquella impresin de que trata el artculo 1456 del Cdigo Civil. No
reviste gravedad la peticin de renuncia por una denuncia de acoso sexual que haba sido
presentada en contra del actor, pues es una persona adulta, de 29 aos de edad a la
fecha del despido y en su sano juicio.
Que la fuerza sea injusta significa que la amenaza debe consistir en medios ilcitos. As,
como el empleador siempre pudo despedir al actor, pues este es un derecho de aqul
(independiente que tal despido sea o no justificado) y suponiendo que se lo haya
amenazado con el despido por el pretendido acoso sexual, ello no es ilegtimo sino
precisamente lo contrario: se habra advertido al actor que la empresa estaba dispuesta a
considerar esa posibilidad, la que la ley le otorga. Bien pudo el demandante rechazar la
peticin de renuncia y esperar la respuesta de su empleador quien, si decida despedirlo
por la causal de la letra b) del N 1 del artculo 160 del Cdigo del Trabajo, le asista al
trabajador el derecho de demandar la injustificacin de tal despido y el pago de las
indemnizaciones correspondientes. Y, por cierto, se reitera, la empresa siempre pudo
despedir al actor, haya o no dado cumplimiento a las normas de los artculos 211-A a 211E del mismo cuerpo laboral y una cosa muy distinta es que tal despido haya podido ser
declarado injustificado.
C. Santiago, 16 diciembre 2009. M.J. N 22599 (C.7)94
ARTCULO 1462: Hay un objeto ilcito en todo lo que contraviene al derecho pblico
chileno. As la promesa de someterse en Chile a una jurisdiccin no reconocida por las
leyes chilenas, es nula por el vicio del objeto.
94
50
Clusula contractual en virtud del cual una de las partes se obliga a no desarrollar a
perpetuidad un determinado negocio. Una clusula que importa obligarse a no
desarrollar
un
determinado
negocio
perpetuidad,
vulnera
un
derecho
A. GENERALIDADES
95
51
3 Las que proceden de actos a que faltan las solemnidades que la ley exige para que
produzcan efectos civiles; como la de pagar un legado, impuesto por un testamento que
no se ha otorgado en la forma debida;
4 Las que no han sido reconocidas en juicio por falta de prueba.
Para que no pueda pedirse la restitucin en virtud de estas cuatro clases de
obligaciones, es necesario que el pago se haya hecho voluntariamente por el que tena la
libre administracin de sus bienes.
Obligacin natural y accin reivindicatoria. De conformidad a lo prevenido en el
artculo 728 del Cdigo Civil, la posesin inscrita se conserva mientras subsista la
inscripcin y se pierde slo por la cancelacin de la misma, entendiendo que ello ocurre
nicamente por voluntad de las partes; por una nueva inscripcin en que el poseedor
inscrito transfiere su derecho a otro; y por decreto judicial.
Habindose establecido como hecho de la causa que los actores son poseedores
inscritos del inmueble cuya reivindicacin se demanda, resultando un hecho pacfico que
el demandado ocupa el referido inmueble y que ste se encuentra debidamente
singularizado, corresponda -tal como lo hicieron los jueces del grado- acoger la accin de
que se trata, resultando por ende improcedentes los argumentos destinados a sustentar la
existencia de una obligacin natural para enervar la accin reivindicatoria.
C. Suprema, 21 julio 2009. M.J. N 20604 (C.8)96
ARTCULO 1489: En los contratos bilaterales va envuelta la condicin resolutoria de no
cumplirse por uno de los contratantes lo pactado.
Pero en tal caso podr el otro contratante pedir a su arbitrio o la resolucin o el
cumplimiento del contrato, con indemnizacin de perjuicios.
A. CUESTIONES GENERALES.
96
Acordada con el voto disidente del Ministro seor Muoz. Conforme a su posicin, de una obligacin natural nace una
excepcin perentoria basada en un hecho positivo destinada a impedir la aceptacin de lo pretendido por el actor o a lo
menos a modificar la situacin jurdica invocada por aquel.
El hecho de haberse celebrado una compraventa sobre inmueble por escritura pblica en que el comprador cumple con su
obligacin y el vendedor solo cumple parcialmente, otorgando la entrega material sin realizar la debida inscripcin para
otorgar la posesin legal, y habiendo prescrito la accin del comprador para exigir el cumplimiento o resolucin, nos
encontramos en el caso de una obligacin natural que permite al comprador retener el inmueble de acuerdo al nmero 2
del artculo 1470 del cdigo civil. La buena fe impone, de acuerdo a lo sealado en el artculo 1817 del Cdigo Civil, que
ante la entrega de la cosa a un comprador, esta entrega prefiere a cualquier derecho que pueda reclamar el vendedor.
52
Ejercicio alternativo o sucesivo de las dos acciones del artculo 1489; renuncia de
una de ellas. a) No pueden entablarse al mismo tiempo las dos acciones. Las
acciones de cumplimiento y de resolucin, como resulta evidente, son incompatibles, de
manera tal que no puede deducrselas conjuntamente. No obstante lo anterior, y slo por
razones de economa procesal, se permite ejercerlas en un mismo juicio, siempre que se
lo haga una en subsidio de la otra.
C. Suprema, 21 enero 2009. M.J. N 19442 (C.4)
Resolucin y buena fe. Para la procedencia de resolucin se exige que quien entabla la
demanda haya cumplido o se encuentre llano a cumplir sus propias obligaciones.
C. Santiago, 21 septiembre 2009. M.J. N 21690 (C.12)97
ARTCULO 1505: Obligacin facultativa es la que tiene por objeto una cosa determinada,
pero concedindose al deudor la facultad de pagar con esta cosa o con otra que se
designa.
El cumplimiento alternativo de la prestacin por parte del deudor no le quita el
carcter de facultativa a una obligacin. Si una sociedad hizo una donacin irrevocable
al Fisco de Chile, de este contrato de donacin naci una obligacin determinada,
consistente en el pago de una suma de dinero equivalente a ochocientos cincuenta y seis
mil dlares, moneda de los Estados Unidos de Norteamrica, pero el objeto de la
obligacin -la prestacin- se poda cumplir de tres formas alternativas: bien en dinero
depositado en arcas fiscales, bien mediante ejecucin de obras, infraestructura,
elementos o instalaciones, o bien mediante una combinacin de ambos, no es que se
trate de una obligacin alternativa, sino que su cumplimiento puede hacerse
alternativamente.
Se estableci una obligacin facultativa, en los trminos del artculo 1505 del Cdigo Civil.
Se rechaza el recurso.
C. Suprema, 30 diciembre 2009. M.J. N 23023 (C.5, C.6 y C.7)
97
Se dedujo recurso de casacin en la forma y fondo en su contra, ambos fueron rechazados por la Corte Suprema en fallo
de fecha 16 de diciembre de 2011, Rol 9176-2009.
53
La parte vencida dedujo recurso de casacin en el fondo pero no consign lo ordenado en el inciso segundo del artculo
197 del Cdigo de Procedimiento Civil dentro de plazo, tenindosele por desistido del recurso.
99
La parte vencida dedujo recurso de casacin en el fondo pero no consign lo ordenado en el inciso segundo del artculo
197 del Cdigo de Procedimiento Civil dentro de plazo, tenindosele por desistido del recurso.
54
s, segn las partes o cuotas que les correspondan en la deuda, y los otros codeudores
sern considerados como fiadores.
La parte o cuota del codeudor insolvente se reparte entre todos los otros a prorrata
de las suyas, comprendidos aun aquellos a quienes el acreedor haya exonerado de la
solidaridad.
Accin subrogatoria del codeudor que paga una obligacin cambiaria. El fiador
codeudor solidario de una obligacin cambiaria que la paga, se subroga en las acciones y
derechos del banco acreedor y por ende, al haber ejercido la accin subrogatoria
cambiaria, le son aplicables sus disposiciones que por especiales, priman sobre aqullas
establecidas en el Cdigo Civil
En consecuencia, al encontrarnos ante un caso de accin cambiaria de reembolso,
prevista en el artculo 83 de ley sobre Letra de Cambio y Pagar, dicha accin est sujeta
al plazo de prescripcin establecido en el artculo 99 de la citada ley, que establece un
trmino de seis meses a contar desde el da del pago que se reclama; a diferencia de las
acciones cambiarias directas y de regreso que conforme lo prev el artculo 98 del citado
estatuto jurdico, prescriben en el plazo de un ao a contar desde el da del vencimiento
del documento, por lo que estn en lo cierto los Jueces del fondo cuando aplican la
prescripcin de 6 meses, puesto que la de un ao del artculo 98 est reservada para las
acciones cambiarias directas, cuyo no es el caso.
C. Suprema, 25 marzo 2009. G.J. N 345, p.114. L.P. N 41800 (C.4 y C.7, p.116)100
100
Con el voto disidente del Ministro seor Muoz. Conforme a su opinin: 3. Que en los negocios jurdicos se pueden
generar mltiples efectos, sin embargo lo determinante en la labor de los tribunales en la accin interpuesta, puesto que esa
y no otra la que corresponde resolver, circunstancia que se produce en la especie pues como lo seala la ejecutada es
posible ejercer la accin de reembolso derivada del pago del pagar, la relativa al pago en general y la derivada del pago
del negocio causal del pagar, como incluso lo sostiene la ejecutada, todo lo cual tiene importancia doctrinaria, pero en el
caso de autos slo cobra relevancia la subrogacin que emana del pago segn lo invoca el actor, esto es por la regulacin
del artculo 1522 del Cdigo Civil, como tambin la norma del artculo 2378 del mismo Cdigo que se vincula con el fiador y
no con el aval, por lo que no resulta aplicable la normativa del artculo 82 de la ley 18.092.
4. Que, sobre los antecedentes precedentemente reseados, se deben precisar los efectos de la solidaridad pasiva. Es
as que sta, como caucin personal da nacimiento a una obligacin de parte de quien la contrae, que est dirigida a
garantizar el cumplimiento de otra obligacin en la que se puede o, no tener inters, resultando que respecto de una misma
obligacin existirn varios obligados.
Encontrndose pendiente el pago de la obligacin, el codeudor solidario no interesado, carece de cualquier accin personal
para exigir prestacin alguna al deudor interesado, ya que su garanta no se ha hecho efectiva, de modo que est sujeta a
una triple condicin: En primer trmino, que no se pague el crdito por el deudor interesado o una proporcin del mismo; en
segundo lugar, que se le requiera el pago de la deuda y, por ltimo, que solucione, a lo menos en parte, la obligacin
caucionada.
Producidos estos eventos, el deudor no interesado que pag, tendr derecho a repetir por el total de lo pagado y slo en
contra de los deudores interesados, esto en atencin a que el artculo 1522 del Cdigo Civil, en su inciso segundo lo
considera fiador y, precisamente cuando paga, y no antes adems la ley lo subroga en los derechos del acreedor.
Es as que el pago es el hecho que da origen a la accin personal de reembolso del artculo 2370 del Cdigo Civil, como
adems, a la accin subrogatoria legal prevista en el artculo 1610 N 3 del mismo Cdigo; acciones que derivan de su
55
ARTCULO 1535: La clusula penal es aquella en que una persona, para asegurar el
cumplimiento de una obligacin, se sujeta a una pena, que consiste en dar o hacer algo
en caso de no ejecutar o de retardar la obligacin principal.
Carcter accesorio de la clusula penal. Si las partes estuvieron de acuerdo en
terminar el contrato de subarrendamiento que las ligaba y la demandada entreg los
bienes que eran objeto del mismo, siendo recibidos por el subarrendador, la clusula
penal acordada en dicho contrato carece de justificacin.
C. Suprema, 29 septiembre 2009. M.J. N 21624 (Sent. de reemplazo C.7)
ARTCULO 1545: Todo contrato legalmente celebrado es una ley para los contratantes, y
no puede ser invalidado sino por su consentimiento mutuo o por causas legales.
A. GENERALIDADES
El principio de autonoma de la voluntad y las garantas constitucionales. El principio
de autonoma de la voluntad o simplemente libertad contractual, est consagrada en el
mbito del derecho privado, y consecuencialmente permite pactar todo aquello que no
contravenga la ley y que, obviamente, no vulnere las garantas constitucionalmente
consagradas; en este caso, la libertad de trabajo , cuyo correlato est sealado en el N
21 del artculo 19 de la Constitucin Poltica de la Repblica.
C. Santiago, 06 abril 2009. G.J. N 346, p. 140. L.P. N 41972 (C.4, p.141) 101
Libertad contractual y clusula de aceleracin de las obligaciones. La denominada
clusula de aceleracin es una modalidad de anticipar el vencimiento de la obligacin,
doble calidad de codeudor solidario no interesado y por haber efectuado el pago, ya que en este evento ha pagado una
deuda ajena y la ley le considera fiador, no antes. Nace aqu la relacin entre los codeudores de contribucin a la deuda.
5. Que al examinar los requisitos de la accin subrogatoria ellos concurren en la especie, desde el momento que ha
existido el pago de la obligacin; que este pago lo efectu quien no es llamado a soportar el gravamen que importa a su
patrimonio; que ha sido til al extinguir la obligacin; que no se encuentra en ninguno de los casos en que se priva de la
accin.
6. Que en consecuencia, al haberse subrogado el ejecutante en los derechos del acreedor y atendida la naturaleza de la
accin incoada ejecutiva cometen error de derecho los Jueces del grado al aplicar la prescripcin seis meses del artculo
99 de la ley 18.092, puesto que al ocupar el lugar jurdico del acreedor goza del mismo plazo de prescripcin que el
portador del pagar.
7. El avalista no puede oponer al portador legtimo excepciones personales del avalado; porque su obligacin es
independiente y el derecho del beneficiario es autnomo, en tanto el fiador puede oponerla a su acreedor la excepcin de
dolo, violencia o cosa juzgada que incida en la obligacin afianzada pero no las personales del deudor. Con todo, el fiador
puede oponer las excepciones que no sean inherentes al deudor y que emanen de la naturaleza de la obligacin principal.
(Artculo 2354 del Cdigo Civil).
8. Que en definitiva, tampoco no puede confundirse la institucin del aval y del fiador, puesto que cada una de ellas
genera obligaciones propias y sujetas a las disposiciones legales que a ellos especficamente se refiere. En efecto, el aval y
la fianza son dos cauciones personales diferentes especficamente el aval est regulado como garanta cambiaria y la
fianza la prev el derecho comn.
101
No se dedujeron recursos en su contra.
56
fijando el tiempo inicial desde el cual debe contarse el plazo de prescripcin, que
conforme al artculo 1545 del Cdigo Civil, es vlida y perfectamente aplicable.
Dicha clusula puede extenderse valindose de formas verbales imperativas o
facultativas, de manera que en el primer caso, verificado el hecho del retardo o la mora, la
obligacin se har ntegramente exigible independientemente que el acreedor manifieste
su voluntad en orden a ejercer el derecho que le confiere la estipulacin y, en el segundo,
esa total exigibilidad depender del hecho que el titular de la acreencia exprese su
intencin de acelerar el crdito.
C. Santiago, 06 marzo 2009. G.J. N 349, p.149. L.P. N 41866 (C.4, p.150)
C. Suprema, 08 abril 2009. M.J. N 19915 (C.4, C.5)
C. Suprema, 19 agosto 2009. M.J. N 21212 (C.4, C.5 y C.6)
C. Suprema, 28 septiembre 2009. M.J. N 21952 (C.6, C.7)
C. Suprema, 30 Septiembre 2009. M.J. N 21982 (C.3, C.4 y C.5)
C. Suprema, 01 Octubre 2009. M.J. N 21654 (C.8, C.9, C.10, C.11 y C.12)102
C. Suprema, 01 Octubre 2009. M.J. N 21638 (Sent. de reemplazo C.5, C.6, C.7, C.8,
C.9 y C.10)
C. Suprema, 14 octubre 2009. M.J. N 21779 (C.4, C.5, C.6, C.7, C.8 y C.9) 103
C. Suprema, 19 octubre 2009. G.J. N 352, p.83. L.P. N 42870 (C.3, C.4 y C.5, p.89)
Clusula de aceleracin; doctrina contraria. El sentido de la clusula de aceleracin es
hacer exigible el total de una obligacin pactada en cuotas, por el solo hecho de la mora
de una de ellas, como si todo el crdito fuere exigible aunque no se haya producido la
mora de las restantes parcialidades, y ste es el derecho que le asiste al acreedor, el de
poder cobrar un total o un saldo insoluto de una obligacin, en el solo evento de la mora
102
Prevencin del ministro seor. Araya. Para l, el sentido de la clusula de aceleracin es hacer exigible una obligacin
que se paga en cuotas, por el solo hecho de la mora de una de ellas, como si todo el crdito fuere exigible, aunque no se
haya producido la mora de las restantes parcialidades y este es el derecho que le asiste al acreedor, el de poder cobrar un
total o un saldo insoluto de una obligacin, en el solo evento de la mora de una de las cuotas en que se dividi el crdito,
cualquiera sea el sentido facultativo o imperativo en que se haya redactado la clusula en discusin.
103
Previenen a lo sentenciado los Ministros seores Muoz y Silva, para quienes El sentido de la clusula de aceleracin es
hacer exigible una obligacin que se paga en cuotas, por el solo hecho de la mora de una de ellas, como si todo el crdito
fuere exigible, aunque no se haya producido la mora de las restantes parcialidades y este es el derecho que le asiste al
acreedor, cualquiera sea el sentido facultativo o imperativo en que se haya redactado la clusula en discusin.
57
de una de las cuotas en que se dividi el crdito, cualquiera sea el sentido - facultativo o
imperativo - en que se haya redactado la clusula.
C. Suprema, 06 mayo 2009. G.J. N 346, p. 82. M.J. N 19941 (C.5 y C.6, p.88)104
C. Suprema, 23 junio 2009. M.J. N 20409 (C.4)105
C. Suprema, 29 diciembre 2009. M.J. N 22946 (C.5)
Clusula imperativa. i) La clusula que seala que: el simple retardo y/o mora en el
pago de todo o parte de las cuotas en la poca pactada para ello dar el derecho al
acreedor para exigir sin ms trmite el pago total de la deuda o del saldo, por su
terminologa y naturaleza jurdica de caducidad convencional del plazo, tiene carcter
imperativo.
En consecuencia a partir de la mora corresponde computar el plazo de prescripcin
C. Suprema, 08 abril 2009. M.J. N 19915 (C.3 y C.5)
ii) Una clusula de aceleracin redactada en los siguientes trminos: El no pago ntegro y
oportuno de una o ms cuotas, da derecho al Banco para exigir de inmediato, como si
fuere de plazo vencido, el total de la obligacin que estuviere pendiente (); aparece por
su terminologa y naturaleza jurdica de caducidad convencional del plazo, como de
carcter imperativo. El sentido de la clusula de aceleracin previamente transcrita es
hacer exigible una obligacin que se paga en cuotas, por el solo hecho de la mora, como
si el crdito en su conjunto fuere exigible, aunque no se haya producido la mora de las
restantes parcialidades y este es el derecho que le asiste al acreedor, de poder cobrar el
total o saldo insoluto de la obligacin, en el slo evento de la mora o retardo, an parcial,
de alguna de las cuotas en que se dividi el crdito.
C. Suprema, 19 agosto 2009. M.J. N 21212 (C.3, C.5 y C6)
104
Previenen a lo sentenciado los Ministros seores Muoz y Silva, quienes sostienen que a partir de la redaccin de las
clusulas de aceleracin es posible determinar dos aspectos perfectamente diferenciados, esto es, el evento y condiciones
en que se hace exigible la obligacin y el derecho que se concede al acreedor para cobrar dicha obligacin. En relacin al
primero, esta puede ser redactada en trminos facultativos o imperativos, quedando radicada en la voluntad el acreedor o
fijado el evento previamente por las partes. De esta forma el momento en que empieza a correr el plazo para que opere la
prescripcin extintiva depender de la redaccin facultativa o imperativa que le hayan dado las partes a la clusula
mencionada.
105
Previene a lo sentenciado el Ministro seor Muoz, para quien la clusula de aceleracin puede ser pactada utilizando
extenderse valindose de formas verbales imperativas o facultativas, de manera que, en el primer caso, verificado el hecho
del retardo o mora se har exigible la totalidad de la obligacin independiente de que el acreedor manifieste su voluntad en
ese sentido, y en el segundo, depender del hecho de que el acreedor manifiesto su intencin de acelerar el crdito., Desde
la presentacin de la demanda a distribucin corresponde computar el plazo de prescripcin.
58
iii) La clusula de aceleracin segn la cual "El no pago oportuno de una cualquiera de
las cuotas de capital e inters, dar derecho al acreedor a hacer exigible de inmediato y
anticipadamente el monto total del saldo insoluto adeudado a esa fecha, el que desde esa
misma fecha se considerar de plazo vencido y devengar a favor del acreedor o de
quien sus derechos represente, el inters mximo convencional que rija durante la mora o
simple retardo" tiene carcter imperativo y, en consecuencia, desde la fecha del
incumplimiento, el acreedor podr accionar y hacer exigible el total de la obligacin al
deudor comenzando a correr el plazo de prescripcin extintiva.
C. Suprema, 30 Septiembre 2009. M.J. N 21982 (C.3 y C.4)
iv) La clusula segn la cual "La mora o simple retardo en el pago de cualesquiera de las
cuotas de este pagar, facultar al Banco para exigir de inmediato el pago del total de lo
adeudado, el que en ese evento, se considerar de plazo vencido para todos los efectos
legales, capitalizndose los intereses devengados hasta esa fecha y devengando desde
ese momento la obligacin el mismo inters penal sealado en el prrafo anterior" por su
terminologa y naturaleza jurdica de caducidad convencional del plazo, tiene carcter
imperativo, de lo cual se deduce la consecuencia innegable que desde la fecha del
incumplimiento, el plazo ya no ser impedimento para que el acreedor pueda accionar, ya
que es exigible la obligacin y se le permite perseguir al deudor desde esa fecha, por lo
que, adems, comienza a correr el plazo de prescripcin extintiva.
El sentido de la clusula de aceleracin previamente transcrita es hacer exigible una
obligacin que se paga en cuotas, por el solo hecho de la "mora o retardo en el pago
ntegro y oportuno de todo o parte de una de las cuotas", como si el crdito en su conjunto
fuere exigible, aunque no se haya producido la mora de las restantes parcialidades y este
es el derecho que le asiste al acreedor, el de poder cobrar el total o saldo insoluto de la
obligacin, en el slo evento de la mora o retardo, an parcial, de alguna de las cuotas en
que se dividi el crdito.
C. Suprema, 01 Octubre 2009. M.J. N 21654 (C.7, C.9 y C.10)
v) La clusula de aceleracin redactada en los siguientes trminos: "El simple retardo y/o
mora en el pago ntegro y oportuno de todo o parte de una de las cuotas en la(s) poca(s)
pactada(s) para ello, dar derecho al Banco de Chile para exigir sin ms trmite el pago
total de la deuda o del saldo a que se halle reducida, considerndose en tal evento la
59
60
vii) La clusula de aceleracin segn la cual "El no pago ntegro y oportuno de una o ms
cuotas del pagar dar derecho al BBVA Banco BHIF para exigir de inmediato, como si
fuere de plazo vencido, el total de la obligacin que estuviere pendiente"; por su
terminologa y naturaleza jurdica de caducidad convencional del plazo, tiene carcter
imperativo, de lo cual se deduce la consecuencia innegable que desde la fecha del
incumplimiento el plazo ya no ser impedimento para que el acreedor pueda accionar, ya
que es exigible la obligacin y se le permite perseguir al deudor a partir de ese momento,
a contar del cual, adems, comienza a correr el trmino de prescripcin extintiva.
Dicho de otro modo, en la aludida clusula se previ que por la sola circunstancia de
retardarse el pago de cualquiera de las cuotas la deuda debe considerarse como si fuese
de plazo vencido, esto es, que el vencimiento o caducidad del plazo se produce por el
solo hecho que el deudor no pague una cuota de la deuda en el trmino previsto, de
manera tal que la caducidad del plazo no depende, entonces como resulta claro del
tenor literal de la estipulacin de ninguna manifestacin de voluntad del banco acreedor,
sino de la sola llegada del trmino all previsto, sin haberse efectuado el pago por parte
del deudor.
De lo expresado resulta indispensable precisar que el sentido del establecimiento de una
clusula de aceleracin cualesquiera sean los trminos que se empleen para ello, es
hacer exigible el total de una obligacin que se paga en cuotas por el solo hecho de la
mora o retardo en el pago ntegro y oportuno de todo o parte de una de ellas, como si el
crdito en su conjunto fuere exigible, aunque no se haya producido la mora de las
restantes parcialidades, y este es el derecho que le asiste al acreedor: poder cobrar el
total o saldo insoluto de la obligacin, en el solo evento de la mora o retardo, an parcial,
de alguna de las cuotas en que se dividi el crdito.
La conclusin anterior es, en este caso, compartida plenamente incluso por quienes no
adscriben al criterio que atiende a los trminos en que dicha clusula fue establecida, toda
vez que para los seguidores de esta corriente la exigibilidad de la obligacin se producir
siempre y a todo evento, en el caso del pago en cuotas, por la mora de una de ellas.
C. Suprema, 19 octubre 2009. G.J. N 352, p.83. L.P. N 42870. (C.4, C.5 y C. 6, p.89)
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Clusula facultativa. Una clusula segn la cual La mora o simple retardo en el pago
del ttulo de crdito otorga derecho al banco acreedor para hacer exigible el monto total
adeudado Se encuentra redactada en forma facultativa.
C. Santiago, 06 marzo 2009. G.J. N 345, p.149. L.P. N 41866 (C.1, p.149 y C.4,
p.150)106
Clusula de aceleracin y plazo de prescripcin. La clusula de aceleracin no puede
ser utilizada para extender o revivir el plazo de prescripcin que hubiere operado respecto
de aquellas cuotas que vencieron conforme al plazo originalmente convenido para su
pago.
C. Santiago, 06 marzo 2009. G.J. N 345, p.149. L.P. N 41866 (C.6, p.150)
Libertad contractual y cesin del contrato; requisitos para que opere. La cesin de
contrato es aceptada por la doctrina y la jurisprudencia, y consiste en que uno de los
contratantes, con el consentimiento del otro, traspasa los derechos y obligaciones
emanados de un contrato bilateral a un tercero, que pasa a ocupar en la convencin la
misma situacin jurdica del cedente. Para que opere requiere adems que el contrato no
se haya ejecutado, o en caso de que se trate de un contrato de tracto sucesivo, que no se
haya ejecutado la ltima de sus etapas de modo que existan an derechos y obligaciones
pendientes, susceptibles de traspasarse.
La cesin de contrato, se diferencia de la cesin de crditos y de la novacin por cambio
de deudor, en que existe un traspaso al cesionario de tanto los derechos como de las
obligaciones que tena el cedente por concepto del contrato. Es por esto que se requiere
de una aceptacin explicita del cesionario para que opere.
C. Suprema, 28 abril 2009. M.J. N 19956 (C.5 y C.6)
B. LA LEY DEL CONTRATO RESPECTO A LAS PARTES, LOS TERCEROS Y EL
TRIBUNAL.
Teora de la imprevisin y la carencia de facultad del juez para revisar contratos. El
artculo 1545 del Cdigo Civil excluye la teora de la imprevisin, pues el contrato no
puede ser dejado sin efecto, y con menos razn an modificado, si no es por voluntad de
las partes los jueces en materia civil no tienen otras facultades que las que se les han
106
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63
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Voto disidente del Ministro seor Muoz. Conforme a su opinin, debe distinguirse en la actividad jurisdiccional la
determinacin de la existencia de un contrato (cuestin de prueba), su sentido y alcance (cuestin de interpretacin) y su
calificacin jurdica (determinacin del carcter legal de los mismos, como de las disposiciones legales aplicables y los
efectos que de tales normas derivan para el caso concreto), siendo esta ltima la actividad culmine, en donde se aplica el
derecho, y que por tanto debe ser susceptible de revisin por el tribunal de casacin.
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65
incorporados y por ende se deben cumplir de buena fe por las partes, como lo es que
para colocar las estructuras donde se instalar el letrero publicitario, el ente municipal
exige autorizacin y la anuencia del dueo de la propiedad y, como tal, ste tendr que
suscribir la documentacin pertinente para acceder a dicha autorizacin.
C. Concepcin, 20 noviembre 2009. M.J. N 22483 (C.9 y C.10)109
Obligaciones, no consignadas expresamente, que integran el contrato. Si la
demandante sostiene la existencia para las partes de obligaciones no sealadas
expresamente en el contrato suscrito con la demandada, y rinde adems de la prueba
documental, prueba testimonial que acredita obligaciones de mantencin de cabaas
arrendadas y de reconocer descuentos, se ha acreditado que la intencin de las partes al
suscribir el contrato no slo se extiende a las obligaciones consignadas en su texto,
siendo parte integrante del mismo, adems, las obligaciones sealadas por la actora.
C. Santiago, 23 octubre 2009. G.J. N 352, p.149. L.P. N 42820 (C.1, p.149)110
Buena fe y el principio venire cum factum propium non valet. En razn del claro tenor
de una clusula segn la cual ""se considerar vencido el plazo de la deuda y podr "el
Banco" exigir el inmediato pago de la suma a que se encuentre reducida, ms sus
reajustes, intereses, comisiones y costas, en los casos siguientes: a) Si se retarda el pago
de cualquier dividendo ms de diez das;" y de acuerdo a lo que constituy el propio
accionar de las partes contratantes en el transcurso del normal cumplimiento de sus
recprocas obligaciones, es posible inferir que tal como concluyeron los sentenciadores
del tribunal ad quem, la institucin demandante renunci tcitamente a su derecho a
acelerar la deuda con ocasin de la mora o retardo en el pago de algunos dividendos;
Es indudable que desde la fecha del incumplimiento o retardo en el pago de dichos
dividendos el plazo ya no era impedimento para que el acreedor pudiese accionar,
requiriendo la ntegra exigibilidad de la obligacin, por lo que, adems, en dicha
circunstancia, comenzara a correr el plazo de prescripcin extintiva de la accin, ya sea
desde la poca misma de la mora -en opinin de los sentenciadores que no hacen
distincin respecto de las formas verbales en que se haya escriturado la clusula de
aceleracin- o desde la interposicin de la demanda -distincin que aparecer
109
Se dedujo casacin en el fondo en su contra, siendo rechazado por la propia Corte de Apelaciones de Concepcin por
considerarlo inadmisible.
110
No se dedujeron recursos en su contra.
66
67
Requerimiento contractual expreso. i) Del texto del artculo 1551 se advierte que el
numeral primero contempla el que se ha llamado requerimiento contractual expreso, el
segundo, el denominado requerimiento contractual tcito y el tercero, el judicial.
Refirindose a la situacin prevista en el nmero uno de la norma indicada, el profesor
Abeliuk seala: Se la llama interpelacin contractual por cuanto en el contrato las partes
han fijado el momento del cumplimiento, con lo cual se considera que el acreedor ha
manifestado a su deudor que hasta esa fecha puede esperarlo y desde que se vence, el
incumplimiento le provoca perjuicios. Cumplido el plazo se van a producir coetneamente
tres situaciones jurdicas: exigibilidad, retardo y mora. Y se la llama expresa para
diferenciarla del caso del N 2 del precepto en que la hay tcitamente. (ob. cit. p. 553) Se
la ha llamado tambin por algunos sistema de mora automtica desde que la mora se
produce automticamente por el mero vencimiento del plazo y su fundamento, para las
obligaciones que tienen plazo determinado, radica en que el deudor conoce exactamente
el momento en que debe cumplir la prestacin, por lo tanto, resulta innecesario acreditar
68
resolucin, cual es que las cosas puedan restituirse al estado anterior, como si el contrato
no hubiese existido.
Si uno de los contratantes que no ha cumplido las obligaciones contradas solicita la
resolucin de la promesa de venta en contra de la otra parte que tampoco ha dado
cumplimiento a las suyas, no procede la indemnizacin de perjuicios pedida pues ella
requiere de mora y en este caso no podra existir para ninguna de las partes de
conformidad con lo dispuesto en el artculo 1552 del Cdigo Civil.
C. Suprema, 19 agosto 2009. G.J. N 350, p.76. M.J. N 20002 (Sent. de reemplazo C.8,
p.87)
ii) El artculo 1552 del Cdigo Civil establece lo que la doctrina ha denominado "excepcin
de contrato no cumplido", figura jurdica de amplia aplicacin en los contratos bilaterales
pues representa una prolongacin del principio de buena fe consagrado en el artculo
1546 del referido cdigo. No es jurdicamente correcto que un contratante demande a su
contraparte exigindole el cumplimiento de diversas prestaciones, si el mismo, no ha
cumplido las suyas.
C. Santiago, 21 septiembre 2009. M.J. N 21690 (C.12)111
iii) La excepcin de contrato no cumplido, que tiene consagracin legal, encuentra su
fundamento en la equidad y la buena fe. As el acreedor que demanda el cumplimiento de
una obligacin o bien persigue la resolucin de un contrato por incumplimiento del deudor
no puede estar de buena fe si por su parte no ha cumplido con su propia obligacin, es
decir, no puede exigirse lo que no se est dispuesto a dar.
C. Suprema, 29 septiembre 2009. M.J. N 21624 (Sent. de reemplazo C.5)
Presupuestos para que opere la excepcin de contrato no cumplido. Los
presupuestos para oponer la excepcin del contrato no cumplido son los siguientes: 1) se
aplica los contratos bilaterales; 2) es necesario que la contraparte contra quien se opone
la excepcin no haya cumplido ni se allane a cumplir alguna obligacin emanada del
mismo contrato; 3) es necesario que la obligacin del acreedor contra quien se opone la
excepcin sea exigible y 4) la buena fe del que opone la excepcin. No puede tenerse por
111
Se dedujo recurso de casacin en la forma y fondo en su contra, ambos fueron rechazados por la Corte Suprema en
fallo de fecha 16 de diciembre de 2011, Rol 9176-2009.
70
D. Circunstancia 3
A. Preliminares
Objeto del N3 del artculo 1554. El plazo en el contrato de promesa constituye un
requisito que ha contemplado el legislador con el objeto de que los contratantes sepan, a
ciencia cierta, cuando deber cumplirse el contrato prometido y que no queden en forma
indefinida ligados de manera contractual. De lo dicho se desprende que las modalidades
indicadas, resultan ser en el contrato de promesa, elementos esenciales de la misma y no
meramente accidentales, razn por la cual no pueden faltar.
C. Suprema, 13 Agosto 2009. M.J. N 20092 (C.38)
Posibilidad de estipular condicin y plazo. Nada obsta que la exigencia del artculo
1554 citado se cumpliera si se combinara un plazo con una condicin.
C. Suprema, 13 Agosto 2009. M.J. N 20092 (C.38)
C. La condicin como hecho que fija la poca de la celebracin del contrato
prometido.
Plazo seguido de condicin que no fijan la poca del contrato. A fin de determinar si
en la convencin se verifica o no la exigencia contenida en la regla tercera del artculo
1554 del Cdigo Civil, se proceder a reflexionar sobre la base de la tesis postulada por la
recurrente, quien en su libelo sostiene que la compraventa qued sujeta a dos
condiciones que fijan, a su entender, suficientemente la poca del contrato y son las
siguientes: a) que la promitente vendedora construyera la vivienda para lo cual dispona
del plazo mencionado en la clusula novena, que indica que "el plazo de ejecucin de las
obras ser de 180 das hbiles a contar de la fecha de obtener el permiso de edificacin,
sin perjuicio de ampliar este plazo en el "tipo" (sic) que le sea posible, por causales no
imputables a la empresa" y b) que la promitente compradora pagara el saldo del precio
72
adeudado. Cuestin esta ltima que de acuerdo a la clusula sexta se acord en los
siguientes trminos: "la entrega material de la propiedad, objeto de este contrato se
efectuar una vez pagada la totalidad del precio de la compraventa a la Sociedad
Constructora Malpo Ltda. y previa firma de la escritura definitiva."
Si se estudia la circunstancia que la recurrente invoca como primera condicin se tratara
propiamente de un plazo seguido de una condicin, esta ltima indeterminada y
potestativa, desde que se desconoce cundo ocurrir el evento fijado por las partes y del
cual depende el cumplimiento de la condicin y, adicionalmente, su verificacin depende
exclusivamente, por una parte, de la actividad que despliegue uno de los contratantes - la
promitente vendedora - y, por otra, de un tercero " la autoridad llamada a otorgar el
permiso respectivo " de lo que se concluye que, finalmente la obligacin del promitente
vendedor de obtener la autorizacin municipal no estara sujeta a ningn plazo. De
manera que, en la situacin expresada se desconoce cuando la condicin estara fallida y,
el legislador, segn se dijo, al disponer esta exigencia ha querido precisamente impedir
que aquel acontecimiento permanezca indefinidamente suspendido, en el entendido que
la promesa es esencialmente transitoria y que tiene por objeto dar lugar al contrato
definitivo.
Que si se analiza el segundo planteamiento formulado por la recurrente, esto es, que el
contrato tambin se encontrara condicionado a que la promitente compradora pagara el
saldo del precio adeudado, se arriba a idntica conclusin que la que ha quedado
consignado en el motivo precedente. Empero tal estipulacin no da cuenta, en ningn
caso, de una condicin que fije la poca de la celebracin del contrato como exige el
artculo 1554.
C. Suprema, 13 Agosto 2009. M.J. N 20092 (C.39 y C.40)
ARTCULO 1555: Toda obligacin de no hacer una cosa se resuelve en la de indemnizar
los perjuicios, si el deudor contraviene y no puede deshacerse lo hecho.
Pudiendo destruirse la cosa hecha, y siendo su destruccin necesaria para el objeto
que se tuvo en mira al tiempo de celebrar el contrato, ser el deudor obligado a ella, o
autorizado el acreedor para que la lleve a efecto a expensas del deudor.
Si dicho objeto puede obtenerse cumplidamente por otros medios, en este caso ser
odo el deudor que se allane a prestarlo.
El acreedor quedar de todos modos indemne.
73
A. GENERALIDADES
112
Se dedujo recurso de casacin en la forma y fondo en su contra, ambos fueron rechazados por la Corte Suprema en fallo
de fecha 10 de noviembre de 2010, Rol 2120-2009.
74
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76
quedando, sin embargo, en su fuerza las disposiciones especiales que autoricen el cobro
de los intereses corrientes en ciertos casos.
2 El acreedor no tiene necesidad de justificar perjuicios cuando slo cobra intereses;
basta el hecho del retardo.
3 Los intereses atrasados no producen inters.
4 La regla anterior se aplica a toda especie de rentas, cnones y pensiones
peridicas.
C. Regla 2da.
Improcedencia de una clusula penal moratoria en obligaciones de dinero. La
indemnizacin de perjuicios de carcter compensatorio no procede en las obligaciones de
dinero. La suma de dinero que corresponde al cumplimiento ntegro de la obligacin es la
indemnizacin de perjuicios compensatorios. Solo es pertinente la indemnizacin del dao
proveniente del retardo en el cumplimiento, que se traduce justamente en el pago de
intereses, por lo que no podr hacerse lugar a la multa del 50% demandada.
C. Santiago, 06 abril 2009. G.J. N 346, p.135. L.P. N 41970 (C.7, p.136)116
Obligaciones de dinero y contrato de leasing. Un contrato de leasing busca la
prestacin de un servicio financiero para que el arrendatario pueda financiar la adquisicin
de bienes, y en este sentido es anlogo a las obligaciones en dinero, lo que quiere decir
que la corte debe atenerse a la normativa que las rige.
C. Santiago, 06 abril 2009. G.J. N 346, p.135. L.P. N 41970 (C.6, p.136)117
Momento desde el que se deben intereses. i) Cuando se trata de juicios estimatorios
declarativos en donde se solicita se determine el monto de una obligacin incumplida, los
intereses moratorios se deben slo desde el momento en que la sentencia resultante se
encuentre ejecutoriada ya que desde ese momento se encuentra precisado con certeza la
suma adeudada.
C. Suprema, 08 Junio 2009. F. del M. N551, p. 221. CL/JUR/5840/2009 (C.11, C.12,
C.13 y C.14, p.224)
116
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77
ii) Que en el caso sub lite, segn se ha dejado establecido, las mercancas de que dan
cuenta las facturas acompaadas a los autos, fueron entregadas por la actora a la
demandada y, no ha sido motivo de debate la circunstancia de que tales instrumentos,
derivados de los negocios comerciales efectuados en diversas oportunidades entre las
partes, contienen una fecha cierta de vencimiento, circunstancia sta que permite
aseverar que la situacin prevista en el numeral primero del artculo 1551 del Cdigo Civil
se identifica precisamente con los presupuestos fcticos de que da cuenta este proceso,
razn por la cual procede colegir que en el especie la deudora, es decir, la demandada,
se encuentra en mora desde el momento que dej de cumplir su obligacin, lo que
sucedi en la fecha estipulada para el vencimiento de cada una de las facturas fundantes
de la demanda. En efecto, las partes pactaron expresamente un plazo en el cual deba
cumplirse la obligacin y ste no era otro que aqul correspondiente a la data de
vencimiento de tales documentos, lo cual no fue obedecido por la demandada.
De manera que en el caso de que se trata, el plazo claramente estipulado, ha surgido
como consecuencia del acuerdo de voluntades que las partes, razn por la cual el solo
hecho de que el deudor no haya cumplido la obligacin en el trmino pactado lo
constituyen mora.
El aserto anterior lleva, a su vez, a concluir que encontrndose el deudor en mora a partir
de la fecha indicada, corresponde que los intereses, que importan una indemnizacin para
el acreedor, se deban, precisamente y como acertadamente lo dispusiera la sentencia
impugnada, desde tal oportunidad, esto es, desde el vencimiento de cada uno de los
instrumentos mercantiles aludidos.
Que procede, adems, consignar que de la obligacin que se persigue en autos dan
cuenta las facturas adjuntadas a los mismos, instrumentos que manifiestamente
representan la cantidad de dinero que cada una de ellas indica, suma que resulta ser, por
cierto, precisa. Por lo anterior no parece cuestionable, entonces, que la deuda que cobra
el acreedor se encuentra determinada - como lo plantea la recurrente - toda vez que se
refiere a una cantidad cierta que proviene, indefectiblemente, de aquellos acuerdos que
las partes plasmaron, segn se adelant, en las respectivos ttulos que el actor
individualiza, siendo suficiente para llegar a la determinacin final, en cuanto a la cantidad
total, la mera sumatoria de cada uno de los montos all contenidos, conocidos por ambas
partes.
78
As, tratndose de una obligacin vencida y lquida, procede concluir que la demandada
est en mora y, por lo mismo, corresponde el pago de intereses, a partir de la data
aludida, sin que sea necesario esperar que tal declaracin, en cuanto al monto de la
obligacin, se disponga en la correspondiente sentencia..
C. Suprema, 21 julio 2009. F. del M. N 552, p. 133. L.P. 42548. CL/JUR/7605/2009 (C.9,
p. 142 y C.11, p. 143)
iii) El artculo 16 de la ley 18.010 sobre operaciones de crdito de dinero dispone que: "El
deudor de una operacin de crdito de dinero que retarda el cumplimiento de su
obligacin, debe intereses corrientes desde la fecha del retardo y a las tasas que rijan
durante ese retardo, salvo estipulacin en contrario o que se haya pactado legalmente un
inters superior", por lo cual habindose seguido un juicio sumario donde en definitiva los
tribunales debieron declarar la existencia misma de una obligacin el pago del honorario
de xito, es necesario concordar con el criterio de la Corte de Apelaciones de
Valparaso, expuesto en el considerando decimoquinto de su sentencia de fecha siete de
abril de dos mil ocho, al considerar que los intereses corrientes deben empezar a correr
slo desde la fecha en que la demandada se constituya en mora de pagar la suma que se
ordena solucionar por medio de dicha sentencia, ya que al ser declarada en dicha fecha,
desde ese momento se hizo legalmente exigible.
C. Suprema, 09 septiembre 2009. G.J. N 351, p.104. L.P. N 42607 (C.14, p.112)
Procedencia de cobrar la indemnizacin moratoria (intereses) y la de otros
perjuicios, como consiguientes a la desvalorizacin monetaria ocurrida durante la
mora del deudor de una obligacin de dinero. El derecho a la reparacin completa del
dao y la extensin requerida para que la vctima quede indemne de todo perjuicio es la
regla de oro en materia de responsabilidad civil y, en lo que concierne a la contractual, es
el ltimo fundamento de los preceptos del cdigo civil que la regula, de donde resulta, el
que todo dao debe ser indemnizado, procurando dejar indemne a la vctima, cuestin
que salvo norma expresa, debe recibir plena aplicacin.
El artculo 1559 del cdigo civil no impide al acreedor de una obligacin pecuniaria,
reclamar, adems de los intereses moratorios que resarzan el retardo, la indemnizacin
de los perjuicios consiguientes a la desvalorizacin monetaria ocurrida durante la mora del
deudor. (C. Suprema, 8 enero 1975. F. del M. N 194, sentencia. 1, p.285)
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Se dedujo recurso de casacin en la forma y fondo, de los cuales la recurrente se desisti previo al examen de
admisibilidad de la Corte Suprema.
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Tribunal
C. Suprema
C. Suprema
C. Suprema
Considerando
5.
6.
7.
1.- Pedro Orozco Serrano, tena dos depsitos de ahorro en el Banco de Chile, uno en
pesos y otro en dlares, y mantena los documentos en custodia de su sede en Talca.
2.- A travs de un mandato especial autorizado ante notario y obtenido de forma
fraudulenta, habiendo suplantando la identidad del demandante, personal del banco en su
sede de Quillota pag los depsitos a un tercero, sin siquiera haber exigido los
documentos de existencia del depsito o su declaracin de extravo.
3. Mara Eugenia Orozco Lpez, en representacin de Pedro Orozco Serrano, deduce
demanda de indemnizacin de perjuicios por responsabilidad contractual en contra del
Banco de Chile.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
QUINTO: Que sin perjuicio de lo sealado y slo a mayor abundamiento, cabe reparar
que, tal como se manifest en las sentencias de primera y segunda instancia, el
incumplimiento contractual en que incurri el demandado Banco de Chile consisti, en el
caso sub lite, en la circunstancia de haber reclamado los efectos de los actos ilcitos de
los cuales fue vctima, en la persona del tomador de los depsitos, abstenindose de
restituir a aqul en la poca convenida los dineros que le fueron entregados en depsito,
trasladando de este modo, las consecuencias de una situacin fctica indebida que lo
perjudic en su propio patrimonio, al peculio de un tercero, que si bien se encontraba
ligado a la institucin bancaria a raz de la contratacin de dos depsitos de ahorro y,
eventualmente de otros servicios financieros, no particip de modo alguno en la
maquinacin fraudulenta orientada a causar la transferencia financiera, sindole, por
ende, dichos actos inoponibles;
SEXTO: Que en relacin al dao moral y a la infraccin que se denuncia respecto de los
artculos 22 , 1556 y 1558 del Cdigo Civil, cabe tener presente que hasta hace muy
poco tiempo atrs se consider -prcticamente en forma unnime-, que el dao moral
proveniente de incumplimiento contractual no era resarcible, postura que ha presentado
cambios, vacilantes al comienzo, pero que actualmente tanto la doctrina como la
jurisprudencia la han ido aceptando. As, esta Corte ya ha resuelto reiteradamente la
procedencia del dao moral en materia contractual
()
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La norma del artculo 1556 del Cdigo Civil no excluye el dao moral, como tampoco
dispone que la indemnizacin slo comprenda o abarque los rubros de dao emergente y
lucro cesante. En efecto, no podra excluir el dao moral, puesto que la ley no ha
prohibido que la indemnizacin por dao moral pueda invocarse fuera del mbito de los
delitos o cuasidelitos
SPTIMO: Que respecto de la alegacin sustentada en una eventual infraccin al artculo
1559 del Cdigo Civil, cabe consignar que el citado precepto establece que "Si la
obligacin es de pagar una cantidad de dinero, la indemnizacin de perjuicios por la mora
est sujeta a las reglas siguientes: N 1 Se siguen debiendo los intereses convencionales,
si se ha pactado un inters superior al legal, o empiezan a deberse los intereses legales,
en el caso contrario; quedando, sin embargo, en su fuerza las disposiciones especiales
que autoricen el cobro de los intereses corrientes en ciertos casos".
La aludida disposicin legal se sustenta en el supuesto de haberse acreditado
judicialmente la efectividad de una obligacin legal o convencional de pagar una cantidad
de dinero, preexistente a la sentencia, que se limita a declarar dicha responsabilidad del
deudor, circunstancia que ha tenido lugar en autos, al haberse acogido la pretensin del
actor de restitucin -a ttulo de indemnizacin de perjuicios- de las sumas de
representativas de los dos depsitos de ahorro renovables con vencimiento al 17/2/2004 y
al 5/3/2004, respectivamente; y de resarcimiento del dao moral que se le produjo.
OCTAVO: Que, por su parte, la supuesta infraccin al artculo 24 de la Ley 18.010 deber
tambin ser rechazada, teniendo para ello en consideracin que dicha norma seala que
"En las obligaciones expresadas en moneda extranjera para pagarse en moneda nacional
no podr pactarse otra forma de reajuste que la que lleva implcita", toda vez que dicha
disposicin no se observa vulnerada en la especie, pues el depsito de ahorro renovable
convenido originalmente en dlares y ascendente a la suma de U.S.$ 16.830, se orden
pagar -en su equivalente en moneda nacional", situacin por la cual no se advierte -como
pretende el recurrente- una indebida condena al pago de una doble reajustabilidad;
REGLA .
a.- El incumplimiento contractual en que incurri el demandado consisti en la
circunstancia de haber reclamado los efectos de los actos ilcitos de los cuales fue
vctima, en la persona del demandante, abstenindose de restituir a aqul en la poca
convenida los dineros que le fueron entregados en depsito, trasladando de este modo,
las consecuencias de una situacin fctica indebida que lo perjudic en su propio
patrimonio, al peculio de un tercero, que si bien se encontraba ligado a la institucin
bancaria a raz de la contratacin de dos depsitos de ahorro y, eventualmente de otros
servicios financieros, no particip de modo alguno en la maquinacin fraudulenta
orientada a causar la transferencia financiera, sindole, por ende, dichos actos
inoponibles.
En la especie, funcionarios del demandado efectuaron el pago de dos depsitos de ahorro
a un supuesto mandatario, sujeto completamente desconocido, a quien jams se le
confiri mandato para tales efectos.
b.- La norma del artculo 1556 del Cdigo Civil no excluye el dao moral, como tampoco
dispone que la indemnizacin slo comprenda o abarque los rubros de dao emergente y
87
lucro cesante. En efecto, no podra excluir el dao moral, puesto que la ley no ha
prohibido que la indemnizacin por dao moral pueda invocarse fuera del mbito de los
delitos o cuasidelitos limitndose a declarar dicha responsabilidad del deudor, se hace
aplicable la regla del art. 1559.
c.- En obligaciones contradas en moneda extranjera no existe doble reajustabilidad si se
ordena su reajuste de acuerdo a la variacin del IPC.
CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 07 enero 2009. F. del M. N 551, p.153. M.J. N 19251. CL/JUR/7712/2009
Texto completo de la Sentencia
CORTE SUPREMA
Santiago, 7 de enero de 2009.VISTO:
En estos autos rol N 3.592-2004, del Primer Juzgado Civil de Talca, juicio en
procedimiento ordinario, caratulados "Orozco Lpez, Marcela c/ Banco de Chile", doa
Mara Eugenia Orozco Lpez, en representacin de don Pedro Orozco Serrano, dedujo
demanda de indemnizacin de perjuicios por responsabilidad contractual en contra del
Banco de Chile representado por su Gerente General don Pablo Granifo Lavn.
Funda su accin sealando que su padre, don Pedro Orozco Serrano, de nacionalidad
espaola, arrib a Chile en el mes de septiembre de 1939, integrndose a la sociedad
como un ciudadano ms y que producto de su trabajo logr reunir el dinero con el que
efectu dos depsitos de ahorro, uno en pesos y otro en dlares de los Estados Unidos
de Norteamrica, capital que confi al Banco de Chile, entidad financiera que supona
cautelara eficazmente la rentabilidad de los fondos.
Expone que dichos depsitos corresponden al depsito de ahorro a plazo renovable en
moneda nacional N 002066-0, por un capital inicial ascendente a $16.632.277, cuya
fecha de captacin es 13/5/2004 y con fecha de vencimiento al 17/2/2004; y al depsito
de ahorro a plazo renovable en dlares de los Estados Unidos de Norteamrica N
0000725, por un capital inicial ascendente a U.S. $16.412, con fecha de captacin
1/3/2002 y con vencimiento al 5/3/2004.
Sostiene que para mayor seguridad de sus inversiones su padre mantena los
documentos en la custodia de la agencia del Banco de Chile de Talca. Agrega que los
empleados de la entidad bancaria tenan cabal conocimiento que el demandante, atendida
su avanzada edad y por el vnculo de la relacin filial que los une, le haba conferido un
mandato constituido por escritura pblica de fecha 28/11/2001, para actuar en su nombre
y representacin ante la institucin, documento debidamente registrado en la agencia de
Talca y que es y ha sido el nico instrumento pblico vlido existente para representar al
actor ante el Banco.
88
89
Finalmente, sostiene que la institucin bancaria debi haber tomado las mximas
prevenciones en la sucursal de origen de los fondos y que la ejecutiva a cargo, no efectu
siquiera una consulta telefnica, pudindose haber evitado la prdida patrimonial total que
sufri el actor, tomando en consideracin los montos elevados a que ascendan los
depsitos.
En sntesis, manifiesta que a merced de un instrumento pblico falso y manifiestamente
insuficiente en cuanto a sus atribuciones o contenido, funcionarios del banco demandado,
actuando por accin u omisin negligentes, validaron en dos oportunidades el pago de
depsitos de ahorro a un tercero que no se encontraba habilitado al efecto, por un valor
superior a los $ 26.000.000, en una agencia distante a ms de trescientos kilmetros de
distancia de la sucursal que detentaba la custodia fsica de los instrumentos de crdito,
sumiendo a don Pedro Orozco Serrano en una prdida patrimonial absoluta y en la
angustia e incertidumbre de plantearse como sobrevivir los aos que le restan de vida.
Solicita en definitiva, que se condene al demandado a pagar al demandante por concepto
de indemnizacin de perjuicios, $16.661.383 y el equivalente en moneda nacional a US
$16.830, ambas sumas representativas de los depsitos de ahorro renovables,
incrementadas con el mximo de intereses legales, ms los reajustes compensatorios de
la desvalorizacin monetaria, representado por la variacin experimentada por el ndice
de Precios al Consumidor o la unidad de reajustabilidad que la reemplace, reajustes e
intereses que se devenguen entre la fecha de constitucin en mora del deudor y la fecha
de su pago efectivo; ms la suma de $ 100.000.000 por concepto de dao moral, ms los
reajustes compensatorios de la desvalorizacin monetaria, representado por la variacin
experimentada por el ndice de Precios al Consumidos o la unidad de reajustabilidad que
la reemplace, reajustes e intereses que se devengarn entre la fecha de constitucin en
mora del deudor y la fecha de su pago efectivo, o que se determine de acuerdo mrito de
autos, con costas.
La demandada, por su parte, contestando la demanda solicit su ntegro rechazo, con
costas, por las siguientes razones:
Indica que el demandante ha planteado que el Banco habra actuado en forma negligente
al pagar dos depsitos bancarios de su propiedad a un supuesto mandatario, sealando,
adems, que dicho mandato habra sido falsificado.
En estas condiciones, afirma, no se divisa la negligencia del Banco, ya que si el
demandante de esta causa fue vctima de un delito, en definitiva la institucin bancaria
tambin lo ha sido, ya que frente a un mandato falsificado, no es posible atribuir
responsabilidad al librado. Refuerza lo anterior, a su juicio, el hecho que la institucin
bancaria obr sobre la base de un mandato otorgado mediante escritura pblica en un
oficio notarial. Asimismo, sostiene que la visacin de un mandato no implica convertirse
en el abogado del mandante para revisar su contenido e implicancias, sino que involucra
precisamente su examen formal, ya que no podra esperarse que el visador cuestione o
interprete la voluntad de quien ha otorgado un mandato por escritura pblica ante un
ministro de fe.
Hace presente que el actor en el petitorio de la demanda, cita normas provenientes de la
responsabilidad contractual, es decir, pretende atribuir responsabilidad de este tipo a su
representado, en circunstancias que la eventual responsabilidad de la entidad bancaria
90
fundamentalmente que: 1.- los hechos en que se sustenta la demanda de autos y que
posteriormente dan por establecidos las sentencias de ambas instancias no son
constitutivos de un incumplimiento de carcter contractual de parte del banco, aadiendo
que aquellos no dicen relacin con su obligacin de restituir; 2.- la improcedencia de
otorgar indemnizacin por dao moral en sede contractual; 3.- la impertinencia de los
intereses legales otorgados respecto de las indemnizaciones concedidas en primera y
segunda instancia; y 4.- la inadecuada concesin de reajustes en relacin a la suma que
se dispuso fuera pagada en representacin del depsito originalmente efectuado en
dlares;
CUARTO: Que luego de lo dicho, resulta que las infracciones que el recurrente estima se
han cometido por los jueces del fondo y que se contienen en el primer captulo del arbitrio
en estudio, persiguen desvirtuar los supuestos fcticos fundamentales asentados por
aquellos, especficamente, que el Banco de Chile incumpli la obligacin contrada al
celebrar con el demandante los respectivos contratos de depsito, esto es, aquella de
restituirle, en la fecha convenida, el dinero entregado en dicha calidad; hechos que
resultan inamovibles para este tribunal, conforme a lo previsto en el artculo 785 del
Cdigo de Procedimiento Civil, desde que han sido establecidos con sujecin al mrito de
los antecedentes, probanzas aportadas por las partes, interpretacin y aplicacin de
normas atinentes al caso en estudio, no siendo posible impugnarlos por la va de la
nulidad que se revisa, al no haberse impugnado el fallo recurrido denunciando infraccin a
leyes reguladoras de la prueba;
QUINTO: Que sin perjuicio de lo sealado y slo a mayor abundamiento, cabe reparar
que, tal como se manifest en las sentencias de primera y segunda instancia, el
incumplimiento contractual en que incurri el demandado Banco de Chile consisti, en el
caso sub lite, en la circunstancia de haber reclamado los efectos de los actos ilcitos de
los cuales fue vctima, en la persona del tomador de los depsitos, abstenindose de
restituir a aqul en la poca convenida los dineros que le fueron entregados en depsito,
trasladando de este modo, las consecuencias de una situacin fctica indebida que lo
perjudic en su propio patrimonio, al peculio de un tercero, que si bien se encontraba
ligado a la institucin bancaria a raz de la contratacin de dos depsitos de ahorro y,
eventualmente de otros servicios financieros, no particip de modo alguno en la
maquinacin fraudulenta orientada a causar la transferencia financiera, sindole, por
ende, dichos actos inoponibles;
SEXTO: Que en relacin al dao moral y a la infraccin que se denuncia respecto de los
artculos 22 , 1556 y 1558 del Cdigo Civil, cabe tener presente que hasta hace muy
poco tiempo atrs se consider -prcticamente en forma unnime-, que el dao moral
proveniente de incumplimiento contractual no era resarcible, postura que ha presentado
cambios, vacilantes al comienzo, pero que actualmente tanto la doctrina como la
jurisprudencia la han ido aceptando. As, esta Corte ya ha resuelto reiteradamente la
procedencia del dao moral en materia contractual, en los fallos de 20/10/1994 y
16/6/1997, publicadas en la Revista de Derecho y Jurisprudencia, Tomo 91, seccin
primera, pgina 100 y Tomo 94, seccin tercera, pgina 94, pero, en especial en las
sentencias de esta Primera Sala Civil de la Corte Suprema de fecha 5/11/2001, 3/9/2002,
28/11/2006, 11/4/2008, 3/7/2008, 28/8/2008 y 24/9/2008, recadas en los ingresos rol N
1.368-00, N 4.035-01 N 320-05, N 3.291-05, N 3901-05, N 3750-05 y N 4.103-05,
que representan una lnea jurisprudencial de los ministros que las suscriben. Los
fundamentos expresados para sostenerla procedencia del dao moral, en tales fallos se
93
96
97
98
Tribunal
C. Santiago
C. Santiago
y C. Santiago
Considerando
1.
1.
1 y 2.
universalidad (C. Suprema; sent. 7 sept. 1988; Rev., tomo 85; sec. 1 pg. 147). De esta
forma se desprende el carcter aleatorio de la venta de derechos hereditarios, esto es,
trata de un contrato de incierta contingencia de ganancia o prdida para los contratantes,
ya sea por el valor que, en definitiva, se les otorgue a los bienes una vez efectuada la
particin y su adjudicacin, o bien, porque el cesionario est obligado a pagar las deudas
que haba contrado el causante, toda vez que a aqul pasan todos los bienes, la
universalidad de la herencia y al mismo tiempo el pasivo de la herencia, ya que el
cesionario pasa a ocupar la situacin jurdica del cedente en ella. No altera lo concluido el
hecho que las partes hayan pretendido hacer recaer tales acciones o derecho sobre un
bien determinado.
Todas las particularidades anteriormente anotadas hacen inaplicable la institucin de la
lesin enorme a la cesin de acciones y derechos, tal como acertadamente lo sostiene la
Sra. Juez de primer grado en el motivo 12 de su fallo;
2) Que en la especie, de acuerdo a lo razonado en el motivo precedente, no resulta
tampoco posible estimar la existencia del error en la sustancia, es decir, el primero de los
previstos en el inciso 1 del artculo 1454, puesto que la cesin de derechos hereditarios
tuvo por objeto una universalidad jurdica, esto es, la herencia o ms, precisamente, una
cuota indivisa que corresponda a la parte demandante y no el derecho que pretenda
tener sobre bienes determinados de la herencia y tratndose, por tanto, de un derecho de
carcter mueble no resulta posible el error sustancial sobre los bienes especficos que
componan dicha universalidad.
REGLA .
a.- El contrato de cesin de derechos hereditarios es un contrato que recae sobre una
universalidad o una cuota que al cedente corresponde en el conjunto de bienes que
comprende el haber hereditario; los bienes individualmente determinados no son objeto
de esta cesin De esta forma se desprende el carcter aleatorio de la venta de derechos
hereditarios, esto es, trata de un contrato de incierta contingencia de ganancia o prdida
para los contratantes, ya sea por el valor que, en definitiva, se les otorgue a los bienes
una vez efectuada la particin y su adjudicacin, o bien, porque el cesionario est
obligado a pagar las deudas que haba contrado el causante, toda vez que a aqul pasan
todos los bienes, la universalidad de la herencia y al mismo tiempo el pasivo de la
herencia, ya que el cesionario pasa a ocupar la situacin jurdica del cedente en ella. No
altera lo concluido el hecho que las partes hayan pretendido hacer recaer tales acciones o
derecho sobre un bien determinado
b.- No resulta posible estimar la existencia del error en la sustancia, es decir, el primero
de los previstos en el inciso 1 del artculo 1454, puesto que la cesin de derechos
hereditarios tuvo por objeto una universalidad jurdica, esto es, la herencia o ms,
precisamente, una cuota indivisa que corresponda a la parte demandante y no el derecho
que pretenda tener sobre bienes determinados de la herencia y tratndose, por tanto, de
un derecho de carcter mueble no resulta posible el error sustancial sobre los bienes
especficos que componan dicha universalidad.
c.- La institucin de la lesin enorme es inaplicable a la cesin de acciones y derechos.
100
4. CITA DE FUENTE.
C. Concepcin, 08 enero 2009. G.J. N 343, p.145. L.P. N 41578.120
Texto completo de la Sentencia
Corte Concepcin
Fallo:
102
Tema Clave
Condicin
Tcita.
Tribunal
Resolutoria C. Suprema
Lucro Cesante
C. Suprema
Considerando
4.
16.
103
debido a que por la declaracin de quiebra era imposible efectuar dicho cumplimiento.
5.- Ante esta situacin la promitente compradora interpone accin de resolucin de
contrato e indemnizacin de perjuicios en contra de la promitente vendedora y el banco.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
CUARTO: Que existe cosa juzgada, de conformidad al artculo 177 del Cdigo de
Procedimiento Civil, cuando entre la nueva demanda y la anteriormente resuelta haya
identidad legal de personas, identidad de la cosa pedida e identidad de la causa de pedir.
Por otra parte, como es de sobra sabido, el artculo 1489 del Cdigo Civil otorga al
acreedor diligente el derecho alternativo para demandar, ante el incumplimiento culpable
de su contraparte en un contrato bilateral, el cumplimiento -sea por naturaleza o por
equivalencia- o la resolucin de la convencin, en ambos casos con indemnizacin de
perjuicios. Tales acciones, como resulta evidente, son incompatibles, de manera tal que
no puede deducrselas conjuntamente; no obstante lo anterior, y slo por razones de
economa procesal, el artculo 17 del Cdigo de Procedimiento Civil permite ejercerlas en
un mismo juicio, siempre que se lo haga una en subsidio de la otra. Pues bien, en tanto la
ley ha facultado al acreedor demandante para hacer valer estas acciones alternativas en
un mismo pleito, si bien subsidiariamente, el ejercicio de esta opcin, para que sea
efectivamente tal, no puede devenir en una carga u obligacin. Como se indic,
nicamente por motivos de manifiesta economa procesal el legislador permite intentar las
acciones en el mismo pleito, en las condiciones ya descritas, mas no compele al actor a
hacerlo y si no lo hace, debe entenderse necesariamente que conserva esta prerrogativa.
En razn de lo anterior, no puede nunca existir cosa juzgada -como propone el banco
recurrente- entre la accin por la que se pretende el cumplimiento y aqulla a travs de la
cual se persigue la resolucin del mismo, toda vez que no obstante las personas o partes
y la causa de pedir pueden ser las mismas, la cosa pedida a que se refiere el artculo
177 citado es substancialmente distinta. En un caso se demanda el cumplimento del
contrato y en otro, su resolucin.
DCIMO SEXTO: Que, contrariamente a lo que se expone en el recurso en cuanto a la
infraccin al artculo 1698 del Cdigo Civil se refiere, la sentencia impugnada no declar
que la actora no logr probar los perjuicios sufridos a ttulo de lucro cesante, sino que
nicamente estableci que la falta de acreditacin se haba extendido a lo que General
Mariner S.A. habra obtenido de haber arrendado el departamento que le haban
prometido vender. Pues bien, sobre la base de hechos probados -mantenimiento cautivo
de capital que no ha podido invertir y utilizacin de ste por parte del banco demandado
en sus actividades financieras con evidente ganancia- por la va de las presunciones
judiciales los jueces de la instancia han establecido la efectiva existencia de un perjuicio,
constitutivo de lucro cesante, que el artculo 1556 del Cdigo Civil obliga tambin a
104
indemnizar.
REGLA .
a.- Las acciones de cumplimiento y de resolucin, como resulta evidente, son
incompatibles, de manera tal que no puede deducrselas conjuntamente. No obstante lo
anterior, y slo por razones de economa procesal, se permite ejercerlas en un mismo
juicio, siempre que se lo haga una en subsidio de la otra.
b.- Para la acreditacin de Lucro cesante el tribunal en base a hechos probados, puede
utilizar presunciones judiciales que le permitan establecer su existencia y monto.
El mantenimiento cautivo de capital que la demandante no ha podido invertir, y la
utilizacin de ste por parte del banco demandado en sus actividades financieras con
evidente ganancia, constituye lucro cesante.
CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 21 enero 2009. M.J. N 19442.
105
Este fallo fue impugnado por la actora por va de los recursos de casacin en la forma y
de apelacin y una de las Salas de la Corte de Apelaciones de Iquique, en sentencia de
7/5/2007, que se lee a fojas 442, rectificada por otra de once del mismo mes y ao, escrita
a fojas 455, rechaz el recurso de nulidad formal y revoc la resolucin apelada,
decidiendo en su lugar que la demanda queda acogida. Especficamente, el fallo declar
resuelto tanto el contrato de promesa de compraventa sobre el que versaba el litigio como
su adicin y conden al demandado Scotiabank Sudamericano a reembolsar a la
demandante, por concepto de indemnizacin de perjuicios por dao emergente, el
equivalente en pesos a UF 1.585,48 correspondiente al capital efectivo que pag al
momento de suscribir el contrato de promesa, y todo lo entregado y que cubra en el futuro
por concepto de dividendos del mutuo hipotecario;
En contra de esta ltima decisin el demandado Scotiabank Sudamericano ha deducido
recursos de casacin en la forma y en el fondo.
Se orden traer los autos en relacin.
CONSIDERANDO:
I.- En cuanto al recurso de casacin en la forma:
PRIMERO: Que en el recurso de casacin en la forma se invoca, en primer trmino, la
causal del N 4 del artculo 768 del Cdigo de Procedimiento Civil.
Argumenta el recurrente que la accin de resolucin de contrato de promesa se interpuso
nica y exclusivamente en contra de Inmobiliaria Anakena Ltda. y la de indemnizacin de
perjuicios se dirigi, tambin nica y exclusivamente, contra Scotiabank Sudamericano.
No obstante lo anterior, agrega, el fallo extiende la demanda de resolucin al banco, que
no fue demandado en este aspecto, y declara que fue parte de la promesa.
Sin embargo, contina el recurso, la discordancia ms grave radica en que el fallo
absuelve a la nica demandada de resolucin de contrato, circunstancia que
necesariamente debi conducir a rechazar la accin de esta clase.
Asimismo, termina el recurso respecto de esta causal, existe ultra petita cuando los
sentenciadores, existiendo en la especie una renuncia de la demandante en orden a
ejercer la accin indemnizatoria en contra de la promitente vendedora, libera de toda
responsabilidad a una demandada que no lo fue por ese concepto, lo que, de nuevo,
causa agravio a Scotiabank Sudamericano, ya que recibe una condena por la totalidad de
los supuestos perjuicios causados en sede contractual.
El segundo motivo de nulidad de forma invocado es el del N 5 del citado artculo 768, en
relacin al N 6 del artculo 170 del Cdigo de Procedimiento Civil y, al efecto, alega el
recurrente que la sentencia atribuy culpabilidad al banco por un supuesto retardo en el
cumplimiento del mandato para vender, no obstante que, aparte de enumerar las
106
juicio.
En el caso de autos el fallo re currido ha emitido pronunciamiento respecto de todas las
acciones ejercidas por General Mariner S.A. en la demanda y, asimismo, de todas las
excepciones opuestas y defensas alegadas por los demandados, cumpliendo
satisfactoriamente, de este modo, con el mandato contenido en la ltima de las normas
citadas. Lo que del tenor del recurso se desprende reprocha el banco recurrente al fallo,
es no haber otorgado -en su concepto- argumentos suficientes para sustentar el rechazo
de estas excepciones y defensas; pero esta falta, en el evento de ser efectiva, justificara
la interposicin del recurso por causal distinta a la aqu invocada.
CUARTO: Que existe cosa juzgada, de conformidad al artculo 177 del Cdigo de
Procedimiento Civil, cuando entre la nueva demanda y la anteriormente resuelta haya
identidad legal de personas, identidad de la cosa pedida e identidad de la causa de pedir.
Por otra parte, como es de sobra sabido, el artculo 1489 del Cdigo Civil otorga al
acreedor diligente el derecho alternativo para demandar, ante el incumplimiento culpable
de su contraparte en un contrato bilateral, el cumplimiento -sea por naturaleza o por
equivalencia- o la resolucin de la convencin, en ambos casos con indemnizacin de
perjuicios. Tales acciones, como resulta evidente, son incompatibles, de manera tal que
no puede deducrselas conjuntamente; no obstante lo anterior, y slo por razones de
economa procesal, el artculo 17 del Cdigo de Procedimiento Civil permite ejercerlas en
un mismo juicio, siempre que se lo haga una en subsidio de la otra. Pues bien, en tanto la
ley ha facultado al acreedor demandante para hacer valer estas acciones alternativas en
un mismo pleito, si bien subsidiariamente, el ejercicio de esta opcin, para que sea
efectivamente tal, no puede devenir en una carga u obligacin. Como se indic,
nicamente por motivos de manifiesta economa procesal el legislador permite intentar las
acciones en el mismo pleito, en las condiciones ya descritas, mas no compele al actor a
hacerlo y si no lo hace, debe entenderse necesariamente que conserva esta prerrogativa.
En razn de lo anterior, no puede nunca existir cosa juzgada -como propone el banco
recurrente- entre la accin por la que se pretende el cumplimiento y aqulla a travs de la
cual se persigue la resolucin del mismo, toda vez que no obstante las personas o partes
y la causa de pedir pueden ser las mismas, la cosa pedida a que se refiere el artculo
177 citado es substancialmente distinta. En un caso se demanda el cumplimento del
contrato y en otro, su resolucin.
QUINTO: Que esta Corte Suprema ha sostenido invariablemente que, respecto de la
causal del N 7 del artculo 768 del Cdigo de Procedimiento Civil, para que la sentencia
tenga el vicio de contener decisiones contradictorias es necesario que las resoluciones
contenidas en ella se contrapongan entre s, de modo que no puedan cumplirse
simultneamente. Dicho de otro modo, hay decisiones contradictorias en el fallo que
contiene varias decisiones incompatibles entre s, o que se destruyen las unas a las otras,
imposibilitando su cumplimiento por carecer de precisin.
109
110
Banco Sudamericano.
d) el permiso de edificacin de la obra en cuestin se otorg el 8/8/1996 y se extendi el
certificado de su recepcin definitiva el 9/2/1999, reducindose ambos a escritura pblica
el 17/8/1996 y el 23/2/1999, respectivamente.
e) el 14/3/1997 la inmobiliaria otorg poder especial al Banco Sudamericano para
prometer vender o vender la edificacin, a partir del 27/3/1998, en el precio y condiciones
que determinara libremente este ltimo, pudiendo, en su caso, proceder de acuerdo en la
promesa o la venta de cada una de las unidades habitacionales, destinndose el
producido al pago de las obligaciones de la mandante para con el banco.
f) el 1/3/1999 la inmobiliaria envi una nota al actor, con copia al banco, dando cuenta de
la recepcin parcial de las obras, entre ellas el departamento en cuestin, informndole
que estaba en condiciones de celebrar el contrato, contestando el demandante, tambin
con copia al banco, el 11 del mismo mes y ao, que aceptaba la propuesta y quedaba a
su disposicin.
g) Scotiabank Sudamericano solicit la quiebra de la inmobiliaria el 5/8/1999, la que fue
declarada por resolucin de 6/10/2000 y publicada el 11/11/2000.
h) el 27/11/2000 la actora inici un juicio de cumplimiento de contrato dirigido en contra de
las partes de esta causa, que finaliz por sentencia de 12/11/2001 que desestim la
accin ejercida, por estimar los magistrados que hallndose la inmobiliaria declarada en
quiebra, la masa de bienes no poda alterarse sino por los medios procesales y
sustantivos que establece la Ley de Quiebras.
i) la demandante ha pagado hasta la fecha los dividendos o cuotas correspondientes al
mutuo, restndole por solucionar hasta diciembre de 2011. A continuacin los jueces de la
instancia razonan que, en cuanto a la excepcin perentoria de prescripcin extintiva, sta
debe rechazarse, por haberse paralizado o detenido el transcurso del plazo. Expresan
que el contrato de promesa estableci dos plazos para la celebracin del contrato
definitivo y considerando uno u otro trmino -dado que el primero venca el 9/4/1999 y el
segundo, entendido como a todo evento, corra hasta el mes de marzo de 1998-, el
cmputo para la aplicacin de la prescripcin se inici en esta ltima fecha o en abril de
1999, de lo que se colige que el actor retard el castigo al presentar la primera demanda
el 27/11/2000, empleada slo para lograr el cumplimiento forzado de la promesa,
deduciendo ms tarde la presente, notificada a las partes el 17 y 18/3/2003.
A mayor abundamiento, agregan, no concurren los supuestos del artculo 2503 del
Cdigo Civil por dos razones: la norma no exige una accin precisa, sino que slo pide
una demanda, y el rechazo de la peticin de cumplimiento lo fue por hallarse la
inmobiliaria en quiebra, decisin que no reviste las caractersticas de sentencia
absolutoria.
Respecto de la accin de resolucin de contrato e indemnizacin de perjuicios, la
sentencia recurrida sostiene que el incumplimiento que se atribuye a Inmobiliaria Anakena
114
Ltda. no es tal, por cuanto esta compaa despleg toda la actividad que le pudiera
resultar exigible. Pero, agrega, debe incorporarse otro indicio, cual es que a la sazn se
encontraba vigente el poder especial que haba extendido a favor del banco el 14/3/1997,
para vender la construccin a partir del 27/3/1998. La conclusin precedente conduce, en
opinin de los sentenciadores, a aceptar la justificacin de la inmobiliaria y a liberarla de
responsabilidad, por haber ocurrido un caso fortuito o una fue rza mayor que le impidi
cumplir el contrato. Scotiabank Sudamericano, afirma el fallo, fue parte de la promesa y
contrajo obligaciones, pues, en efecto, compareci tanto en este contrato como en su
ampliacin, lo que denota su intervencin en la totalidad del acuerdo y conocimiento y
voluntad en cuanto a su compromiso. Tambin es posible aadir, agregan los
magistrados, que no slo el consentimiento para participar, sino adems las obligaciones
que contrajo, se encuentran inequvocamente expresadas en los citados documentos,
tanto en las formas verbales utilizadas, cuanto en la idea central de cada una de las
"declaraciones" que dice haber efectuado. Ello, explican, porque afirm que al celebrarse
la compraventa alzara la hipoteca que gravaba el inmueble, agregando ms adelante que
en caso de hacer efectiva la garanta o de ejercer cualquier derecho como acreedor de la
inmobiliaria, cuidara que se respetara y cumpliera la compraventa prometida y, en caso
de iniciar cualquier accin para adjudicarse los bienes o de venderlos a terceros,
procedera a otorgar el contrato prometido en las condiciones fijadas.
El descargo de Scotiabank Sudamericano, en orden a que de acuerdo a la promesa todo
lo anterior "se cumplir salvo en cuanto se vea legal o judicialmente impedido de
cumplirlo", estiman los sentenciadores carece de sustento. Desde luego, justifican, no lo
tiene porque la obra fue recibida el 9/2/1999, comunicando la inmobiliaria el 1/3/1999 a la
actora y al banco que se encontraba en condiciones de celebrara el contrato prometido,
en virtud de la recepcin parcial de la obra, sin que a esa fecha existiera impedimento
legal o judicial alguno; por el contrario, el banco contaba con mandato de aqulla para
vender el inmueble. Tampoco posee ese carcter la declaracin de quiebra, contina el
fallo, porque fue provocada a instancias del propio Scotiabank Sudamericano, sabiendo o
debiendo saber que su propio quehacer lo colocaba en situacin de incumplimiento,
mxime cuando percibi, recibe y recoger el dinero efectivo pagado a la suscripcin de
la promesa y los dividendos hasta diciembre de 2011, en virtud del contrato de mutuo que
por este mismo negocio lo liga a la actora.
De esta forma, concluyen los jueces, establecido como fue que la disculpa no posee
sustento jurdico y que la inmobiliaria no pudo cumplir la carga en lo que a ella le
concerna por la actuacin del banco, surgi el nexo causal entre esta actividad y el
incumplimiento, que evidentemente caus perjuicios a la demandante, desde que sta
abon un monto al contado en el momento de la suscripcin de la escritura y ha
amortizado regularmente los dividendos por el mutuo que celebr con el banco, sin
obtener la legtima contraprestacin -la venta que deba efectuar al contar con un
mandato en tal sentido-, logrndose as el nico convencimiento posible, cual es que la
actora satisfizo a cabalidad las obligaciones que se asign, en cambio el banco no slo
impidi que la inmobiliaria cumpliera las pertinentes, sino que incurri en mora y en
incumplimiento culpable, producindose entre uno y otro acontecimiento relacin de
115
como se dijo, no ocurri, sino todo lo contrario-, pero no afect, en modo alguno, las
obligaciones asumidas por el banco y que decan relacin no con la promesa, sino con la
compraventa prometida.
UNDCIMO: Que en cuanto a la infraccin de los artculos 2116 y 2129 del Cdigo Civil
que se denuncia en el recurso, la sentencia impugnada no condena a Scotiabank
Sudamericano a indemnizar perjuicios en razn de haber incurrido en supuestas
infracciones al contrato de mandato que celebr con Inmobiliaria Anakena Ltda., sino por
haber incumplido aquellas obligaciones que asumi personalmente para con la actora
General Mariner S.A. al comparecer en el mismo instrumento en que esta ltima acord el
contrato de promesa celebrado con la inmobiliaria. Por consiguiente, no pudo haber
existido vulneracin de estos preceptos. Lo que los sentenciadores dicen en relacin al
mandato nicamente lo es para demostrar la injustificacin de la falta de actividad del
banco, inactividad que se tradujo, jurdicamente, en el incumplimiento de las obligaciones
por l asumidas. A mayor abundamiento, no puede el demandado Scotiabank
Sudamericano excusar su falta de diligencia en la circunstancia de haberse declarado la
quiebra de Inmobiliaria Anakena Ltda., pues esta declaracin se obtuvo, precisamente, a
instancia suya.
Este ltimo hecho de la causa, fijado como tal por los jueces de la instancia, condiciona y
determina toda la responsabilidad del banco en este proceso, pues, como tambin se
estableci, en el instrumento pblico de 14/7/1997 que las partes denominaron "Contrato
de promesa de compraventa y otros convenios", Scotiabank Sudamericano expres que
en caso de tener que iniciar cualquier accin judicial para adjudicarse bienes en dicho
inmueble o antes de cualquier venta a terceros proceder a otorgar el contrato prometido,
en las condiciones aqu pactadas.
Como se destaca de la transcripcin de la clusula, el banco demandado se oblig a
otorgar el contrato prometido -cuestin para la que contaba con poder suficiente en razn
de encontrarse vigente el mandato que le haba conferido la inmobiliaria- antes de tener
que iniciar cualquier accin judicial para adjudicarse bienes en el inmueble o antes de
cualquier venta a terceros y, no obstante ello, opt por pedir la quiebra de Inmobiliaria
Anakena Ltda. Es este precisamente el incumplimiento culpable que los sentenciadores,
de manera acertada, atribuyen a Scotiabank Sudamericano y que constituye la fuente de
la responsabilidad que declaran a su respecto.
La par te final de la misma estipulacin, en tanto indica que todo lo aqu expresado salvo
que el banco se vea legal o judicialmente impedido de cumplir, en todo o parte, lo
precedentemente expresado (sic), en nada altera la conclusin anterior, pues, como se
dijo ms arriba y los jueces tambin notaron, la quiebra de Inmobiliaria Anakena Ltda.
(hecho que a juicio del banco justificara su incumplimiento) fue declarada por peticin del
mismo banco. En otros trminos, fue el propio Scotiabank Sudamericano el que, por un
hecho suyo, se puso en situacin de -slo aparente- imposibilidad de cumplimiento y esto
es algo que el Derecho no tolera.
DUODCIMO: Que lo dicho en los dos fundamentos que preceden es suficiente para
117
descartar la comisin de error de derecho en la aplicacin del artculo 1489 del Cdigo
Civil, por cuanto, como se indic tambin al razonarse sobre el recurso de casacin en la
forma, no fue la resolucin del contrato de promesa de compraventa propiamente dicho la
que se declar en el fallo recurrido y, por lo mismo, los perjuicios que se obliga a
indemnizar no son tampoco los derivados de este incumplimiento no declarado, sino los
causados por el banco demandado al negarse injustificadamente a cumplir la obligacin
que l haba asumido en virtud de uno de esos otros convenios acordados en el
mencionado instrumento de 14/7/1997, cual es, en representacin del promitente
vendedor y en ejercicio del mandato conferido al efecto, otorgar la compraventa definitiva,
no obstante haberse cumplido todos los presupuestos previstos por las partes que lo
hacan procedente.
DCIMO TERCERO: Que respecto de la supuesta vulneracin del artculo 1487 del
Cdigo Civil, relativo a los efectos de la condicin resolutoria cumplida, cabe sealar que
la sentencia recurrida ha tenido por probado que el incumplimiento del demandado
Scotiabank Sudamericano caus perjuicio a la demandante General Mariner S.A. y esos
perjuicios son los que condena a indemnizar. El monto de stos es el que los magistrados
identifican correctamente con la suma pagada por la actora a la inmobiliaria por el
departamento y los dems bienes involucrados en la operacin, mismos que no pudo
comprar por culpa del banco. El hecho que la sentencia se haya valido de un trmino
poco apropiado, como resulta ser el verbo reembolsar, no quita que la suma que ordena
pagar revista la naturaleza de una indemnizacin de perjuicios, tal y como se pidi en la
demanda.
DCIMO CUARTO: Que en cuanto a la vulneracin relativa a las normas de la
prescripcin extintiva y al artculo 3 del Cdigo Civil, corresponde decir, como se lo hizo
ms arriba, que el hecho que falle la condicin prevista en la promesa de que penda la
celebracin del contrato prometido, o ms precisamente, que sta no se verifique en el
trmino convenido, no obsta a que aqul se celebre igualmente si las partes convienen en
ello. Los nicos efectos que produce la condicin fallida afectan a las partes que
intervinieron en el acto en que esa condicin se acord, esto es, en la promesa, cuyas
obligaciones, en tal escenario, no podan ser exigidas compulsivamente.
En el caso de autos la obligacin de indemnizar nace y, por lo tanto, se hace exigible,
desde el momento en que Scotiabank Sudamericano incumple culpablemente la
obligacin que haba asumido, causndole perjuicios a la actora, y ello tiene lugar -como
se expuso en el considerando undcimo y lo sealan apropiadamente los jueces de la
instancia en la parte final del motivo dcimo noveno del fallo recurrido-, cuando pide la
quiebra de Inmobiliaria Anakena Ltda. sin antes otorgar el contrato de compraventa
prometido en representacin de la misma inmobiliaria y en virtud del mandato con el que
contaba, y este hecho tiene lugar bastante antes de cinco aos contados
retrospectivamente desde la fecha de notificacin de la demanda. De este modo, no han
resultado infringidas las normas que regulan la prescripcin como modo de extinguir las
obligaciones, como se denuncia en el recurso, y el hecho que el fallo impugnado haya
otorgado razones distintas a las antes dadas para desestimar tal alegacin carece de
118
119
DCIMO SPTIMO: Que de este modo y en virtud de las razones contenidas en los
motivos que anteceden, ha quedado demostrado que el fallo recurrido no ha incurrido en
los errores de derecho que se le atribuyen por el demandado Scotiabank Sudamericano,
conclusin que conduce a que la casacin en el fondo intentada por esta parte sea
desestimada.
Por estas consideraciones y visto, adems, lo dispuesto en las normas legales citadas y
en los artculos 764 , 765 , 766 , 767 y 808 del Cdigo de Procedimiento Civil, se
rechazan los recursos de casacin en la forma y en el fondo deducidos por el demandado
Scotiabank Sudamericano en lo principal y primer otros, respectivamente, de la
presentacin de fojas 458, contra la sentencia de 7/5/2007, escrita a fojas 442, rectificada
por resolucin de once del mismo mes y ao, rolante a fojas 455.
Regstrese y devulvase, con sus agregados.
Redaccin a cargo del abogado integrante seor Hernn lvarez Garca.
N 2940-07.-.
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sres. Milton Juica
A., Sergio Muoz G., Sra. Margarita Herreros M. y Sr. Juan Araya E. y Abogado
Integrante Sr. Hernn lvarez G.
120
Tribunal
C. Suprema (S.d.R.)
C. Suprema (V.D.)
Considerando
5,13,14 y 15.
A, b, c y d.
a) Que en estos autos se ha discutido la rescisin por lesin enorme del contrato de
compraventa de un inmueble, segn reza la escritura de 17 de abril de 1998, extendida
ante el notario pblico suplente, don Carlos Swett Muoz;
b) Que en dicha compraventa se estableci que el precio de la misma se pagaba parte en
dinero y parte en otra cosa (departamento nmero cuarenta y tres, la bodega nmero
veinticuatro y el derecho de uso y goce exclusivo sobre el estacionamiento nmero dos del
edificio Tricahue), cosa que indudablemente tiene un valor superior al dinero dado como
parte del precio y, en consecuencia, de conformidad a lo dispuesto en el artculo 1794 del
Cdigo Civil cuando el precio consiste parte en dinero y parte en otra cosa, se entender
permuta si la cosa vale ms que el dinero y venta en el caso contrario , nos encontramos
ante un contrato de permuta o cambio y no ante una compraventa;
c) Que si bien es cierto, que el cdigo de Bello en el artculo 1900 establece que Las
disposiciones relativas a la compraventa se aplicarn a la permutacin en todo lo que no se
oponga a la naturaleza de este contrato... , es indudable que no le son aplicables las
normas de rescisin por lesin enorme, en atencin a que en la permuta rige un aspecto
subjetivo para el intercambio de las cosas que la conforman; y, por el contrario, en la
compraventa de bienes races rige un principio objetivo que lo da la propia ley al sealar
como sustento de la posible lesin, el justo precio de la cosa que se vende.
d) Que en razn de lo sealado, no caba sino el rechazo de la accin intentada, por
improcedente.
REGLA .
a.- Corresponde al vendedor acreditar el justo precio del inmueble vendido al tiempo del
contrato, y que el precio que ha recibido del comprador es inferior a la mitad de ese justo
precio. Si no se configuran que la vendedora haya recibido menos de la mitad del justo
precio de la cosa vendida, slo cabe rechazar la demanda..
Voto Disidente.
a.- La lesin enorme en el caso de permuta de inmuebles, pese a lo dispuesto en el
artculo 1900, no le es aplicable en atencin a que en la permuta rige un aspecto subjetivo
para el intercambio de las cosas que la conforman; a diferencia del caso de la compraventa
en donde rige un principio objetivo que lo da la propia ley y que es el sustento de la lesin,
cual es el justo precio de la cosa que se vende.
8. CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 21 enero 2009. G.J. N 343, p.118. L.P. N 41601.
Texto completo de la Sentencia
Corte Suprema
Via del Mar, agosto veintids de dos mil cinco.
Vistos:
122
Que, a fs. 1, comparecen don Patricio Eugenio Daz Broughton, abogado, domiciliado en
Jos Zapiola N 7.821, La Reina, Santiago, don Gonzalo Javier Daz Broughton, ingeniero
civil, domiciliado en calle Interior del Monje N 10.704, La Dehesa, Lo Barrenechea,
Santiago, don Luis Alfonso Daz Broughton, periodista, domiciliado en calle Jos Zapiola
N 7.821, La Reina, Santiago, don Jorge Cristin Daz Broughton, factor de comercio,
domiciliado en calle Jos Zapiola N 7.821, La Reina, Santiago, doa Mara Carlota
Gndara Naylon, labores por s y en calidad de representante legal de los hijos menores
matrimoniales Rodrigo Felipe Andrs y Alfonso Cristin, ambos de apellido Daz Gndara,
todos domiciliados en calle Ligora N 476, departamento 2, Jardn del Mar, Via del Mar,
y representados en estos autos por el abogado don Juan Carlos Manrquez Rosales,
segn mandato judicial agregado a fs. 23 y 26 del cuaderno de medidas prejudiciales que
se tiene a la vista, quienes interponen demanda de rescisin de contrato por vicio de
lesin enorme en contra de Inmobiliaria Plamher S.A., sociedad comercial, del giro de su
denominacin representada por don Jos Maritano Sciaccaluga, ingeniero civil, ambos
domiciliados en calle 1/2 Norte N 770 de Via del Mar, a fin que se declare, en definitiva y
con costas, la rescisin del contrato de compraventa celebrado el 17 de abril de 1998,
entre don Carlos Alfonso Daz Sanhueza, como vendedor, y la demandada como
comprador, en relacin al bien raz ubicado en poblacin Reaca, calle Borgoo N
16025, de la comuna de Via del Mar. Fundamentan los actores su demanda en los
siguientes hechos: que mediante escritura publica otorgada en el oficio de su propia
Notara, a cargo del Notario Interino, seor Carlos Swett Muoz, con fecha 17 de abril de
1998, don Carlos Alfonso Daz Sangueza, cnyuge y padre de los actores, suscribi
contrato de compraventa con la demandada, en virtud del cual vendi, cedi y transfiri el
inmueble individualizado, pactando como precio la suma de 6805,24U.F., equivalentes, a
esa fecha, a la suna de $96.735.330. El 9 de mayo de 1998, el vendedor, don Carlos
Alfonso Daz Sangueza falleci, a consecuencia de una larga enfermedad y que segn su
mdico de cabecera, doctor Juan Moya Mrquez, le haba causado una absoluta
incapacidad fsica y mental, en un proceso degenerativo de sus facultades, que le
invalidaban en sus ltimos meses de vida para tomar decisiones profesionales y
particulares de cualquier naturaleza. Segn el profesional citado, el causante y vendedor
sufri, durante su enfermedad Hepatopata Crnica y Depresin durante los ltimos cinco
aos hasta la fecha de su muerte, deteriorndose fsica y psquicamente, estando
incapacitado de tomar decisiones y moverse fsicamente por estar postrado en cama, a
raz de fractura de fmur que sufri, siendo hospitalizado de urgencia desde marzo de
1998 hasta el da de su muerte, 09 de mayo del mismo ao, concluyendo que para el da
01 de abril de 1998, el paciente se encontraba incapacitado para tomar decisiones
profesionales y particulares de cualquier naturaleza. La sucesin se abri bajo el imperio
de un testamento solemne abierto, que reconoce la calidad de herederos universales a los
demandantes. La notable desproporcin entre el precio real del inmueble y aqul pagado
en virtud del contrato, que se impugna, a la data de su celebracin, confiere, legtima y
activamente a sus herederos, los actores, el derecho a accionar solicitando la rescisin
por lesin enorme de la referida convencin, en su calidad de continuadores jurdicos de
la persona del vendedor, teniendo un obvio inters en el asunto. Que, en efecto, segn
tasaciones independientes del terreno mismo, hoy baldo, y sin tener en consideracin la
edificacin que se asentara en l, ha sido valorizado, a lo menos, en la suma de
$325.000.000, o sea, a razn de 38,95 U.F. el metro cuadrado por una superficie de ms
de 550 metros cuadrados. Sin considerar la plusvala que tena y tiene; dicho terreno si se
lo destina a fines de construccin inmobiliaria, la cifra aumentara, a lo menos, en un 25%
ms. Por otro lado, la casa habitacin emplazada en el predio, y que tambin es objeto de
la referida compraventa, hoy demolida, a la fecha de celebracin del contrato estaba
construida con materiales nobles y sobre la base de una edificacin tradicional en tres
123
raz de estas conversaciones, el seor Daz, por propia iniciativa, plante la posibilidad de
vender su propiedad. La respuesta inicial de la inmobiliaria fue negativa, toda vez que el
proyecto ya estaba concluido, y no se requera, de modo alguno dicho inmueble, el que,
adems, por su ubicacin y lo angosto del terreno, no constitua un aporte importante o
trascendental al proyecto y tena slo una connotacin accesoria o marginal. Sin
embargo, luego de conversaciones, la inmobiliaria decidi proponerle una oferta, en un
valor que se estim deba ser inferior al que se haba pagado por los inmuebles ubicados
en la parte superior que daban hacia subida El Encanto, bsicamente por el carcter de
residual que tena, porque no formaba parte del proyecto, por los mayores costos y gastos
que demandara y por la demora que involucrara una reevaluacin, reestudio y
aprobacin del mismo.
Sobre ese supuesto, y a peticin del seor Alfonso Daz, se sostuvo una reunin en su
casa habitacin, para tratar la factibilidad del negocio; el seor Daz negoci la venta,
intervino personalmente e incluso elabor y expuso argumentos por los cuales obtuvo un
alza en el precio que originalmente se le ofreci. Si bien se encontraba afectado por una
enfermedad que en ese entonces lo mantena en cama, se hallaba en pleno uso de sus
facultades, tanto as que fue celebrada una reunin de aproximadamente una hora, en la
que particip el gerente de la inmobiliaria, el abogado seor Magasich y la secretaria del
seor Daz, Srta. Mari. Exigi adems, en ese momento, visitar el departamento que se le
ofreca en pago para manifestar su conformidad. Al da siguiente, se traslad en vehculo
y en silla de ruedas, al recin terminado edificio Tricahue , ubicado en 8 Norte con 2
Poniente de esta ciudad, visitando personalmente el inmueble en presencia del personal
de la inmobiliaria, expresando su satisfaccin con el mismo y con la operacin. De lo
anterior queda claro que don Alfonso Daz se encontraba en pleno uso de sus facultades.
7. Que debe tenerse en consideracin que el valor del inmueble vendido est constituido
en esencia papel precio de mercado, cual es el que los compradores estaban dispuestos
a pagar a la poca del contrato. Este precio ha de referirse, al inmueble en s,
independientemente considerado, prescindiendo de las circunstancias o beneficios que
podran asignarse a otros inmuebles, vecinos de las que ste careca. El precio debe
analizarse en relacin a cuatro presupuestos generales: uno, la situacin actual del
inmueble; dos proyecciones del inmueble, esto es, lo que puede construirse en el mismo;
tres, lo que puede aportar a un proyecto o a otros predios colindantes y; cuatro, lo que
ofrece el mercado, situacin esta ltima que se determina por la comparacin con el
precio de otros inmuebles vendidos en la cercana en la misma poca. Tomando en
cuenta estos cuatro factores, el precio pagado no slo fue justo, sino algo ms elevado
que el precio de mercado. El bien raz, contaba con una construccin antigua, de
conservacin deficitaria, carente de adelantos tcnicos y de las comodidades que de
stos se desprende. Se ubica en un terreno escarpado, muy pronunciado y de mala
topografa, de suelos dunosos que exigen profundos y costosos cimientos para cualquier
construccin; adems, tiene un edificio construido en su deslinde sur, y otro proyectado
en su deslinde norte y oriente, es decir, rodeado de construcciones con una nula
privacidad. Finalmente, las condiciones de constructibilidad, actuales y futuras, son
desventajosas, toda vez que, considerado por s slo es imposible proyectar cualquier
construccin en altura, y a futuro, resulta impensable toda nueva edificacin. En atencin
a todos estos antecedentes, se puede determinar que el valor comercial de este inmueble
era incluso mucho ms bajo que aquel que se pag. Por ltimo, en mrito de los
antecedentes sealados, solicita el rechazo de la demanda con expresa condena en
costas por carecer de fundamento plausible para litigar y ocasionar grave perjuicio a la
demandada.
128
8. Que, a fs. 48, los actores evacuan la rplica, haciendo presente que no se har cargo
ni controvertir los elementos de carcter subjetivo que, eventualmente, hubieren podido
ser considerados por la demandada para la fijacin del precio del inmueble, materia de
autos, al tiempo de la compraventa, vale decir, 17 de abril de 1998, por no ser procedente
ni atingente a lo discutido en orden a la determinacin del justo precio del inmueble, a la
data de la convencin, ya que solamente se basa en elementos de carcter objetivo. La
circunstancia de ser el inmueble residual o marginal dentro del marco del proyecto
inmobiliario, y que aquellos previamente adquiridos eran necesarios y bsicos para ello,
que se haban pagado los permisos municipales respecto de los otros siete terrenos
componentes del pao fusionado, son meros antecedentes subjetivos. Lo determinante es
plantear el valor de dicho inmueble a la poca del contrato sobre las mismas bases en
que fue negociado, vale decir, su ubicacin privilegiada cabida, sin perjuicio de la
construccin emplazada.
Expresa que, conforme a la inscripcin de fs. 8133, N 10214 del Registro de Propiedades
del ao 1998, del Conservador de Bienes Races de Via del Mar, donde consta la fusin
de ocho diferentes predios adquiridos por la Inmobiliaria Plamher S.A., y al plano de ella
agregado con el N 5044 del Registro de Documentos del mismo ao y Conservador, se
puede apreciar un pao de terreno de aproximadamente 5.370 metros cuadrados, dentro
de los cuales la demandada pretende levantar proyecto inmobiliario denominado Los
Navos . Dentro de los citados predios, se encuentra el vendido por don. Carlos Alfonso
Daz Sangueza a la demandada, individualizado como lote C, con una ubicacin
claramente privilegiada en el marco del pao fusionado al igual que los lotes A y B del
plano.
9. Que, para establecer el valor real, el Tribunal deber acudir a las pericias de
profesionales conocedores de los valores referentes a la cosa discutida, a negocios
efectuados en la oportunidad, a las normas de mercado que determinen la oferta y la
demanda, quedando excluido siempre el valor de afeccin del citado bien. Revisados los
lotes A y B, se puede constatar que el valor del metro cuadrado pagado en aquellas
compraventas, asciende a 27 U.F. y 26 U.F. Despectivamente, cifras cercanas a las que
esta parte ha demandado como el justo precio correspondiente al lote C, materia de
autos, por lo que, en conclusin, de una apreciacin seria y documentada con todos los
elementos objetivos a ponderar, se podr establecer el justo precio del bien raz, materia
de este proceso, el cual, por lo sealado, y las probanzas que se allegarn, es claramente
superior al doble de la cifra pagada.
10. Que, a fs. 53, la demandada evacua la dplica, sealando en dicho libelo que la
demandante se encuentra errada en relacin a los parmetros para determinar el justo
precio de la cosa, el que debe referirse al tiempo del contrato y, necesariamente,
atenderse a las circunstancias fcticas, es decir, de hecho, y totalmente objetivas que se
verificaban respecto del inmueble, objeto de la compraventa, en el momento en que se
celebr dicho contrato en relacin con el bien raz, materia del contrato cuestionado. Que
as las cosas, la casa habitacin demandada en el terreno era antigua, por lo que slo
debe interesar el terreno y su ubicacin. En cuanto a la topografa del terreno, ste, en s
mismo, no tiene igual valor que otros con condiciones muy diversas y que por s solos
permiten desarrollos inmobiliarios o construcciones de casa habitacin, lo que en el
vendido era prcticamente irrealizable. De igual manera, el entorno del inmueble y su falta
de capacidad incida en el precio del mismo en forma negativa, en atencin a que, en el
entorno, exista un edifico ya levantado y otro por construirse a la brevedad. Todos estos
129
131
18. Que en consecuencia, a fin de dar un justo precio al inmueble de autos debern
promediarse los valores otorgados por las diferentes pericias, que haciendo lo sealado
este sentenciador puede concluir que el justo precio del inmueble ubicado en calle
Borgoo N 16025 era la suma de $209.859.130, suma que excede al precio pagado.
19. Que la lesin enorme se configura como un vicio objetivo, es decir, que tan slo se
establece su presencia en un contrato de compraventa a travs de la confrontacin
matemtica entre el precio convenido y el justo precio de la cosa en el momento del
negocio. Si la lesin enorme es un vicio objetivo, la consideracin de la buena o mala fe
es irrelevante, por lo que aquella se presume. Se propende ms bien por un estado de
cosas justo en cuanto reconoce los efectos propios de la buena fe contractual. Parte de la
doctrina sostiene que la lesin subjetiva contiene slo dos elementos: uno objetivo
(notoria e injustificada desproporcin de las prestaciones), y otro subjetivo (explotacin o
aprovechamiento de la situacin de inferioridad de la vctima del acto). La doctrina
posterior afirma que la lesin cuenta con tres elementos: dos subjetivos, uno de ellos a
cada una de las partes del acto; el elemento subjetivo del lesionante; es la explotacin o
aprovechamiento de la situacin de inferioridad de la contraparte y el elemento subjetivo
de la vctima es la necesidad, ligereza o inexperiencia. El tercer elemento, objetivo es la
evidente e injustificada desproporcin de las prestaciones.
El elemento objetivo: es la existencia de una ventaja patrimonial evidentemente
desproporcionada y sin justificacin . El elemento objetivo supone que haya
desproporcin entre las contraprestaciones, y que sea evidente su justificacin. Se
presume que existe el aprovechamiento o explotacin cuando medie notable
desproporcin de las prestaciones ; los clculos debern hacerse segn valores al tiempo
del acto y la desproporcin deber subsistir en el momento de la demanda. Desproporcin
evidente quiere decir perceptible, incuestionable, de grado tal que no deje la menor duda
sobre su existencia, ya que siendo la lesin una excepcin a la regla de que los contratos
se celebran para ser cumplidos, es de interpretacin restrictiva. Debe tratarse de una
ventaja patrimonial que excede lo que habitualmente ocurre en los negocios. La notable
desproporcin debe ser un grosero desequilibrio entre las prestaciones. Tambin se exige
que esa ventaja patrimonial no tenga justificacin. La desproporcin debe existir en el
momento de la celebracin del acto y subsistir al tiempo de la demanda, porque de lo
contrario se configurara otra situacin como es la desproporcin sobreviniente del artculo
1198 y debe subsistir porque si por alguna causa extraa al acto, el objeto del mismo se
hubiera valorizado, resultara ilgico permitir la accin. El elemento subjetivo de la vctima
hablamos de necesidad, ligereza o inexperiencia de una de las partes: que en caso de
autos se da la ligereza del vendedor Es la actitud de quien acta en forma irreflexiva y sin
ponderar adecuadamente las ventajas e inconvenientes de una operacin, se trate de
personas normales, situacin que se desprende del propio testimonio del testigo del
demandado don Jos Luis Maritano Sciaccaluga de fs. 122 quien narra las circunstancias
en las cuales se produjo la oferta de venta, es as que expresa el testigo que la
construccin provoc ruidos molestos a los vecinos, y don Alfonso Daz reclam por ello
solicitando la interrupcin de las faenas, cosa que no era posible, en esa situacin el
seor Daz manifest su inters en la venta de su inmueble, para ese efecto se realiz
posteriormente una reunin en la casa del seor Daz y dur aproximadamente una hora,
discutindose los trminos econmicos que el testigo tena de la empresa compradora y
ofreciendo en parte de pago un departamento de la misma. A la semana siguiente el
vendedor seor Daz visit el departamento mostrndose conforme con l y cerr el
negocio.
132
20. Que ningn testigo expresa que el seor Daz se hizo asesorar por entendidos en la
materia, realizando el negocio segn sus conocimientos, que dada su calidad de abogado
y notario evidentemente no implicaban el mercado habitacjonal, tasaciones y valores de
construccin. Cabe considerar adems, que como no se ha discutido el seor Daz se
encontraba delicado de salud, situacin que aunada a las molestias por los ruidos
provenientes de la construccin vecina permite presumir fundadamente que actu con
ligereza al aceptar el precio ofrecido por su inmueble.
21. Que el artculo 1888 del Cdigo Civil dispone que podr rescindirse por lesin
enorme. Por su parte el artculo 1889 del mismo cuerpo legal seala que el vendedor
sufre lesin enorme, cuando el precio que recibe es inferior a la mitad del justo precio de
la cosa que se vende. Como ya se ha concluido en el cuerpo de esta sentencia, el justo
precio es la suma de $209.859.130, habiendo percibido la suma de U.F. 6.805
correspondiente a $96.735.330 siendo esta suma inferior a la mitad del justo precio de la
cosa que se vende. Facultando el artculo 1980 del cdigo ya citado, al comprador a, a su
arbitrio consentir en la rescisin o completar el justo precio con deduccin de una dcima
parte.
Por estas consideraciones y teniendo adems presente lo dispuesto en los artculos se
resuelve:
En cuanto a la forma:
1. Que se rechaza la objecin de documentos deducida a fojas 110.
2. Que se rechazan las tachas de testigos de fojas 117 y fojas 122.
3. Que se rechaza la objecin a informe pericial opuesta a lo principal de fojas 320.
En cuanto al fondo:
4. Que se acoge la demanda interpuesta por don Patricio Eugenio Daz Broughton, don
Gonzalo Javier Daz Broughton, don Luis Alfonso Daz Broughton, don Jorge Cristin Daz
Broughton, doa Mara Carlota Gndara Naylon por s y en calidad de representante legal
de los hijos menores matrimoniales Rodrigo Felipe Andrs y Alfonso Cristin, ambos de
apellido Daz Gndara, en contra de Inmobiliaria Plamher S.A., sociedad comercial
representada por don Jos Maritano Sciaccaluga y se declara nulo por vicio de lesin
enorme el contrato de compraventa celebrado entre don Alfonso Daz Sanhueza y la
Inmobiliaria Plamher S.A., sociedad comercial, celebrado el 17 de abril de 1998 en
relacin al inmueble ubicado en Poblacin Reaca, calle Borgoo N 16.025 de la comuna
de Via del Mar, con una superficie aproximada de 550 metros cuadrados. La vendedora
queda facultada a su arbitrio consentir en la nulidad del contrato aludido o completar el
justo precio con deduccin de una dcima parte.
5. La suma a completar devengar inters comente y reajustes legales en la misma
proporcin en que hubiere variado la Unidad de Fomento, a contar de la fecha de esta
sentencia. Con costas.
Regstrese.
Dictada por doa Loreto Aguilar Volbrath, Juez Titular.
133
Rol N 9182000.
de Precios al Consumidor, desde la fecha del contrato hasta aquella en que se verifique la
restitucin, ms los intereses y reajustes legales en la forma consignada en el numeral 5
de lo resolutivo del fallo en alzada y a contar de la fecha de esta sentencia;
4) Se fija el plazo de noventa das a contar del cmplase de esta sentencia para que el
comprador ejerza el derecho de opcin y el pago que deber hacerse en su caso;
5) Se reserva a la parte demandante para discutir incidentalmente en el cumplimiento del
fallo o en otro juicio diverso la naturaleza, especie y monto de perjuicios si stos se
hubiesen producido, todo sin costas de la instancia por haberse apelado, con motivo
plausible.
Regstrese y devulvanse con los cuadernos y anexos trados a la vista.
Se deja constancia que no firma el presente fallo el Abogado Integrante seor Bernardino
Muoz, quien concurri a la vista y acuerdo, por encontrarse ausente.
Se deja constancia, asimismo, que el presente fallo se dicta con esta fecha por cuanto el
redactor, Ministro seor Silva, fue sometido a una operacin y estuvo con licencia mdica,
entre los das 28 de diciembre de 2006 y el 14 de enero de 2007.
Redaccin del Ministro seor Manuel Silva Ibez.
Pronunciada por los Ministros Titulares de la Iltma. Corte seores Rafael Lobos
Domnguez y Manuel Silva Ibez y Abogado Integrante seor Bernardino Muoz
Snchez.
Rol N 12706.
vendedor falleci luego de una larga enfermedad que le haba causado una absoluta
incapacidad fsica y mental en un proceso degenerativo de sus facultades.
Aade que su doctor de cabecera, don Juan Mota Mrquez, certific el da 1 de abril de
1998 se encontraba incapacitado para tomar decisiones profesionales y particulares. La
sucesin se abri bajo el imperio de un testamento solemne abierto. Asevera que segn
tasaciones independientes del terreno, hoy baldo habida consideracin que tiene ms de
550 metros cuadrados frente al mar y con directa vista a la baha de Valparaso ha sido
valorizado en $325.000.000, o sea, 38,95 U.F. el metro cuadrado.
La casa habitacin que se engazaba en el predio fue demolida, pero estaba construida
con materiales nobles, lo que debe ser considerado en la fijacin del justo precio.
Luego de lo cual, estima que el justo precio del inmueble cuya resciliacin se solicita a la
fecha del contrato, 17 de abril de 1998 flucta entre $325.000.000 y $400.000.000.
Agrega, que la demandada en el terreno comprado pretende desarrollar un proyecto
inmobiliario compuesto por 85 departamentos en 5 edificios, cuyos valores fluctan entre
los U.F. 7.000 y 10.000, segn publicidad.
Se indica en la demanda que atendido el estado de salud del vendedor se estara ante un
caso en que presuntamente no existi declaracin de voluntad o sta no pudo darse de
manera libre y soberana, por lo que el Tribunal de oficio debera declarar la nulidad
absoluta del contrato por falta de voluntad.
Cita los artculos 1888 y siguientes y 706 del Cdigo Civil y solicita tener por interpuesta
demanda de rescisin de contrato por el vicio de lesin enorme y se declare nulo por el
vicio invocado el contrato de compraventa celebrado el 17 de abril de 1998, entre don
Carlos Alfonso Daz Sanhueza y la demandada para que sta ltima ejerza a su arbitrio
consentir en la nulidad o completar el justo precio conforme lo dispone el artculo 1890 del
Cdigo Civil con costas y al pago de intereses y/o frutos civiles que se devenguen entre la
data de la presente accin y la de su cumplimiento efectivo
Contestando el demandado solicit el rechazo de la demanda en virtud de los siguientes
fundamentos; indica que para el proyecto inmobiliario adquirieron siete inmuebles, se
dispuso la demolicin de algunas de las casas y con maquinarias se da
involuntariamente un muro de la propiedad de don Carlos Alfonso Daz Sanhueza, por lo
que se le ofreci pronta reparacin del dao y el propio Carlos Alfonso Daz plante por
propia iniciativa a la posibilidad de vender su propiedad, pero la respuesta de la
inmobiliaria fue negativa puesto que el proyecto estaba concluido y permisos pagados.
Luego de conversaciones la inmobiliaria propuso una oferta y a peticin del seor Daz
Sanhueza se reunieron en su casa con su secretaria y exigi visitar el departamento que
se le ofreca, en parte de pago, al da siguiente se traslad en un vehculo y silla de
ruedas al recin terminado edificio en Via del Mar, por lo que se encontraba en pleno uso
de sus facultades, negoci y realiz tratativas dentro de cnones normales.
En relacin al precio de la compraventa del inmueble refiere que no slo fue justo sino
ms elevado que el precio de mercado en razn de los siguientes criterios:
138
Cuarto: Que los Jueces para dar estricto cumplimiento a lo dispuesto por el Constituyente
y el legislador han debido ponderar toda la prueba rendida en autos, puesto que la
valoracin integral de la prueba as lo impone, tanto aquella en que se sustenta la
decisin, como la descartada o aquella que no logra producir la conviccin del
sentenciador en el establecimiento de los hechos, lo cual no se logra incluso con la simple
enunciacin de tales elementos, sino que con una ponderacin racional y pormenorizada
de los mismos. Esta mayor exigencia, si se quiere, proviene de la calificacin de justo y
racional del procedimiento que debe mediar para asentar las decisiones de los rganos
que ejercen jurisdiccin en el Estado. Tan importante como antigua es esta obligacin
impuesta a los magistrados, por lo que su inobservancia corresponde sancionarla,
privando de valor al fallo.
Cabe, en este mismo sentido recordar, que considerar implica la idea de reflexionar
detenidamente sobre algo determinado, es decir, concreto. En consecuencia, es nula por
no cumplir con el precepto del N 4 del artculo 170 del Cdigo de Procedimiento Civil, la
sentencia que hace una estimacin general de la prueba, deduce una conclusin que
tambin es general referente a la materia debatida y que, sin analizar detalladamente las
probanzas, se limita a expresar si ellas acreditan o no un hecho dado, o las declara
ilegales o impertinentes o por ltimo considera inoficioso pronunciarse acerca de ellas.
Quinto: Que es as como del contexto de justificacin que antecede, queda claramente
demostrada la falta absoluta a las disposiciones y principios referidos en que incurrieron
los Jueces de la instancia, al prescindir de la cabal ponderacin de la prueba, la cual slo
pudo ser observada mediante una valoracin racional, pormenorizada e ntegra de los
medios probatorios allegados a la causa. Esta omisin constituye el vicio de casacin en
la forma previsto en el artculo 768 N 5, en relacin con el artculo 170 N 4, ambos del
Cdigo de Procedimiento Civil, por la falta de consideraciones de hecho que le sirven de
fundamento al fallo.
Sexto: Que el artculo 775 del Cdigo de Procedimiento Civil dispone que los tribunales,
conociendo, entre otros recursos, por la va de la casacin, pueden invalidar de oficio las
sentencias, cuando los antecedentes manifiesten que ellas adolecen de vicios que dan
lugar a la casacin en la forma.
Sptimo: Que por las razones expresadas en las motivaciones anteriores, se proceder a
ejercer las facultades que le permiten a esta Corte casar en la forma de oficio.
De conformidad a lo expuesto, las normas legales citadas y lo sealado en los artculos
786 y 806 del Cdigo de Procedimiento Civil, se invalida la sentencia dictada por la Corte
de Apelaciones de Valparaso, de veintids de enero de dos mil siete, escrita a fojas 668,
la que se reemplaza por la que se dicta a continuacin, sin nueva vista de la causa.
Tngase por no interpuestos el recurso de casacin en el fondo deducido en la
presentacin de fojas 77, por el abogado don Marcos Magasich Airola, en representacin
de la parte demandada, Inmobiliaria Plamher S.A.
Se previene que el Ministro seor Juica, en el considerando tercero slo acepta su acpite
primero.
Regstrese.
141
142
b) Por escritura pblica de 17 de abril de 1998 la Inmobiliaria Plamher S.A., vende, cede y
transfiere, por partes iguales a los seores Rodrigo Felipe Andrs y Alfonso Cristin Daz
Gndara, para quien compra y acepta, en representacin legal de los mismos su padre
don Carlos Alfonso Daz Sangueza, el departamento nmero cuarenta y tres, la bodega
nmero veinticuatro y el derecho de uso y goce exclusivo sobre el estacionamiento
nmero dos, del Edificio Tricahue.
c) El inmueble objeto del contrato tena una superficie aproximada de 550,00 metros
cuadrados con 11 metros de frente y 50 metros de fondo.
d) Con fecha 9 de mayo de 1998 falleci don Carlos Alfonso Daz Sangueza, la posesin
efectiva de la herencia se concedi el 10 de agosto de 1998 a los demandantes.
2. Que con el mrito de la documental reseada precedentemente es posible concluir
que el seor Daz Sangueza vendi su inmueble considerando su valor en 12,37
Unidades de Fomento el metro cuadrado.
3. Que con la documental aparejada a fojas 139, consistente en las resoluciones N 7
de 10 de febrero de 1998 y 368 de 12 junio de 1998, ambas de la D.O. y de la I.
Municipalidad de Via del Mar; permiso de obra nueva 1899 d 19 de febrero de 1999 se
debe tener por cierto que antes de celebrarse la compraventa entre don Carlos Daz
Sangueza y la demandada, sta ltima haba adquirido 7 propiedades races vecinas a la
que fue del causante de los demandantes, con las que form un pao sobre el que obtuvo
permiso para desarrollar un proyecto inmobiliario consistente en la construccin de tres
edificios de departamentos y se haban elaborado proyectos de arquitectura, agregndose
posteriormente un ltimo terreno que es aquel materia de la controversia.
Es un hecho pacfico y por ende incontrovertido, encontrndose adems refrendado por la
instrumental que se alleg al proceso que el terreno de que se trata tena por un costado
un edificio y por el otro lado uno proyectado y por su parte posterior colinda con los
inmuebles de propiedad de la inmobiliaria demandada, en consecuencia quedaba entre
un edificio construido y otros que se comenzaban a construir.
4. Que se ha celebrado entre la demandada y el causante de los actores un contrato de
compraventa sobre un inmueble, respecto del cual sus causahabientes han sealado que
debe rescindirse por lesin enorme.
El prrafo 13 del Ttulo XXIII, del Cdigo Civil trata de la rescisin de la venta por lesin
enorme y el artculo 1888 del citado cdigo establece que El contrato de compraventa
podr rescindirse por lesin enorme .
El artculo 1889 del cdigo sustantivo distingue cuando hay lesin enorme: el vendedor
sufre lesin enorme cuando el precio que recibe es inferior a la mitad del justo precio de la
cosa que vende y; el comprador sufre lesin enorme cuando el justo precio de la cosa que
compra, es inferior a la mitad del precio que paga por ella.
El justo precio se refiere al tiempo de celebracin del contrato y se entiende en general
por justo precio el valor venal o de mercado del bien raz. En nuestro derecho no puede
concluirse que el justo precio es el valor intrnseco de lo vendido, sino el valor real que la
cosa tiene en el momento del contrato, que no es otro que el que regula la oferta y la
demanda en relacin con la valorizacin actual del dinero y con el inters por la
143
precio pagado debi ser inferior a los 8,9 unidades de fomento el metro cuadrado, en
circunstancias que lo pagado fueron 12,3 7 unidades de fomento por metro cuadrado.
9. Que si bien la prueba testimonial, tratndose de una apreciacin, cual es el valor del
terreno, por s sola no es suficiente para determinar el justo precio de un inmueble, al
tratarse de testigos que han participado en transacciones similares en el sector, o que han
tenido conocimiento de transacciones anlogas, efectuadas en la misma poca de la
celebracin del contrato materia de la demanda refuerzan la conclusin anterior sobre que
no se ha recibido por el vendedor menos de la mitad del justo precio. En la especie, la
demandada, hizo comparecer a estrados a los seores Piero Chiappini Sanguinetti,
Francisco Vivanco Fierro, Jos Luis Maritano Sciaccaluga, quienes en sntesis
sostuvieron que dadas las caractersticas topogrficas del terreno y sus dimensiones, el
precio del metro cuadrado no debera exceder las 12 o 13 unidades de fomento. En el
caso particular de la propiedad de que se trata cuyo frente es exiguo la posibilidad de
construir una edificacin independiente era muy poco probable, que para pagar el precio
se utiliz el mismo criterio adoptado por el directorio de la empresa de cancelar los
mismos valores pagados en la compra de terrenos vecinos, especficamente por los lotes
22, 21 y 20 del loteo el Encanto por los cuales se cancel 12 unidades de fomento. Que,
adems el terreno de que se trata, dara lugar a un proyecto altamente ineficiente si se
consideran las limitantes de distanciamiento y rasantes, y que su aporte al proyecto era
marginal.
10. Que por el contrario, los testigos que deponen por el actor, seores Brisalia
Moncada Mackay, Catalina Basaure Herrera, Jorge Moncada Mackay y Margarita
Crdova Lpez nada aportan a la resolucin del asunto controvertido, desde que sus
declaraciones no dicen relacin con el precio del inmueble, las caractersticas del mismo
sino que se refieren a las circunstancias que rodearon la suscripcin de la escritura
pblica y el estado de salud del vendedor.
11. Que, en cuanto concierne al peritaje evacuado en autos por don Pablo Rodrguez
H., el que se decret para mejor acierto del fallo, quien estima en $267.831.160 el valor
del inmueble de autos desglosado en: $187.000.000 el terreno; $43.984.050 y
$32.947.110, las construcciones tipo C y E; y anexos en $3.900.000. Dicha tasacin,
apreciada conforme a la sana crtica, no es idnea para acreditar el justo precio del
inmueble de que se trata, como consecuencia de asentarse en archivos de la Direccin de
Obras Municipales en lo que se refiere a la edificacin original que existi, a las
ampliaciones y anexos. Ahora bien, en cuanto al valor del terreno, no seala el perito en
qu se basa para concluir que ste asciende a $187.000.000. Similares deficiencias se
observan en los peritajes evacuados por don Galo Prez Krumenacker a fojas 314, quien
estima el valor del terreno de 550 metros cuadrados, en razn de 14 unidades de fomento
el metro cuadrado, en 11.321 unidades de fomento, considerando: menor frente de la
propiedad, depreciacin por antiguedad de las edificaciones, lote individual fuera de
norma, el momento de la venta y los costos adicionales asociados al cambio del proyecto
y; don Hernn Maturana Alarcn, quien estima el valor del inmueble en U.F. 14.127
equivalentes a $200.817.013, considerando el metro cuadrado en 19 unidades de
fomento. Para lo cual tuvo en consideracin las caractersticas del inmueble a la poca de
su adquisicin por la empresa demandada, el sector donde se emplaza la construccin de
auge turstico residencial, no reciente y en expansin permanente, lo que lleva a este
Tribunal a desestimar su valor probatorio.
145
12. Que, la sana crtica es aquella que nos conduce al descubrimiento de la verdad por
los medios que aconsejan la recta razn y el criterio racional puesto en juicio. De acuerdo
con su acepcin gramatical, puede decirse que es el analizar sinceramente y sin malicia
las opiniones acerca de cualquier asunto. Las reglas que la constituyen no estn
establecidas en los Cdigos. Se trata, por lo tanto, de un proceso interno y subjetivo del
que analiza una opinin expuesta por otro, o sea, es una materia esencialmente de
apreciacin y, por lo mismo, de hecho, cuya estimacin corresponde privativamente a los
Jueces del fondo. (Sentencia C.S., 13.11.1963, R., t. 60, sec. 1, pg. 340) Que, la
apreciacin de este medio probatorio est sujeta a cnones que implican una mayor
libertad de juzgamiento, donde los fundamentos legales se substituyen por las racionales
mximas de experiencia. (Sentencia C.S., 30.06.2002)
13. Que, en consecuencia, los informes periciales, valorados por el Tribunal con la
latitud de que est legalmente investido, dadas las imprecisiones advertidas, relacionadas
con aspectos eminentemente tcnicos, propios de la ciencia del perito, no reviste el mrito
probatorio suficiente para conducir, mediante su sometimiento a las racionales mximas
de experiencia, al establecimiento del hecho que sirven de fundamento a la demanda y
que han sido fijados como objeto de las probanzas en la resolucin respectiva.
14. Que las restantes pruebas rendidas consistentes en la inspeccin personal del
Tribunal, de siete de noviembre de dos mil, en que se constata que el inmueble materia
del presente juicio, tiene un frente de 11 metros, lo que permiti a la inmobiliaria ampliar el
frente de su proyecto en siete metros aproximadamente hacia el edificio vecino y la
absolucin de posiciones del representante de la demandada, en nada alteran las
conclusiones a que se ha arribado.
15. Que al no haberse configurado un presupuesto de la accin, cual es que la
vendedora haya recibido menos de la mitad del justo precio de la cosa vendida, slo cabe
rechazar la demanda.
Por estas consideraciones y de conformidad con las normas legales citadas, se revoca la
sentencia apelada de veintids de agosto de dos mil cinco, escrita de fojas 608, en cuanto
por ella se acoge la demanda de lo principal de fojas 1 y en su lugar se decide:
a) Que se rechaza la demanda deducida en lo principal de fojas 1 por don Juan Carlos
Manrquez Rosales, en representacin de Patricio Eugenio, Gonzalo Javier, Luis Alfonso y
Jorge Cristin Daz Broughton y de Mara Carlota Gndara Taylor, por s y en su carcter
de representante legal de sus hijos menores Rodrigo Felipe y Alfonso Cristin, Daz
Gndara.
b) Que se exime a los actores del pago de las costas por estimar que tuvieron motivo
plausible para litigar
Se previene que el Abogado Integrante seor Oscar Herrera Valdivia, fue de parecer de
rechazar la demanda teniendo nicamente presente:
a) Que en estos autos se ha discutido la rescisin por lesin enorme del contrato de
compraventa de un inmueble, segn reza la escritura de 17 de abril de 1998, extendida
ante el notario pblico suplente, don Carlos Swett Muoz;
146
147
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Profesiones Liberales
C. Temuco
5 y 8.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
5.- Que en atencin a la naturaleza del tema debatido, ste se aleja de las premisas
generales de las relaciones jurdicas contradas voluntariamente de aquellos contenidos
de voluntad de orden civil o comercial -campos en los cuales el legislador, como la
doctrina, han sido prolficos- ya que no resultan aplicables, amplia y directamente, ni sus
normas, ni inicialmente al menos, los principios, que rigen la responsabilidad civil del
profesional conforme a los artculos 2118 del Cdigo Civil, al menos en cuanto a que se
ajusta a los trminos del mandato.
148
REGLA .
a.- La responsabilidad civil del profesional de acuerdo al artculo 2118 del C.Civ. se aleja
de las normas de la responsabilidad contractual civil y comercial, no sindole aplicables
de forma directa, amplia y general, al menos inicialmente, dichas normas y principios.
b.- En el mbito de la responsabilidad contractual del profesional el error en la informacin
de lo obrado no es causal de responsabilidad sino solo en la medida que sea adems un
incumplimiento en las obligaciones del profesional, que cause o genere un dao y que el
incumplimiento se deba a no haberse cumplido la obligacin, a haberse cumplido
imperfectamente o haberse retardado en su cumplimiento, conforme a lo dispuesto por el
artculo 1556 del C.Civ.
149
CITA DE FUENTE.
C.Temuco, 23 enero 2009. M.J. N 19450.
dcimos sexto y en relacin al dao emergente seala que ste no fue acreditado por las
actoras por lo que no dar derecho a dicha indemnizacin y que en cuando al dao moral
las actoras acreditaron que el incumplimiento del demandado les produjo una lesin a su
integridad squica como lo declararon los testigos de fojas 161 a 166 por lo que seala
que dar lugar al pago de esta indemnizacin conforme al monto que fijara
prudencialmente fijndolos en el que ya se ha indicado.
2.- A fojas 265 la parte demandada interpuso recurso de casacin en la forma y en el
primer otros, recurso de apelacin. Fundo el primer recurso en la causal prevista en el N
5 del artculo 768 del Cdigo de Procedimiento Civil, por haber sido dictada con omisin
del requisito del N 5 del artculo 170 de dicho texto, es decir, omisin de las
consideraciones de hecho que sirven de fundamento a la sentencia dado que en los
Considerandos Primero a Tercero solo cita los elementos de prueba sin hacer una
relacin lgica sobre su valor probatorio omitiendo el anlisis y conclusin de los
documentos de fjs. 127,128,130 y 131 que son determinantes, y que fueron ratificados por
los mdicos que los emitieron, en circunstancias en que si los hubiera analizado no habra
llegado a la conclusin que le permiti descartar la presencia de los quisten dentro del
abdomen . Seala que tampoco hizo una apreciacin jurdica de la declaracin de los
doctores Wilfredo Diener Ojeda, Gloria Carreo Campos, Rodolfo Espinoza Gonzlez,
Jaime Garay Tosen, las cuales son determinantes toda vez que, en general, coinciden en
que el procedimiento fue el adecuado en cuanto a la utilizacin de la laparoscopia
diagnstica, razn por la cual solicita invalidar la sentencia y dictar la de reemplazo.
Asimismo, deduce, en el otros de la presentacin recurso de apelacin basado en la no
existencia de responsabilidad indemnizatoria, toda vez que hay que hacer una distincin
entre obligaciones de medio y de resultado, en que en las de resultado el deudor de la
prestacin es garante del resultado, en cambio en la de medios el deudor no lo es
siempre que observe la conducta esperada, se obtenga o no el resultado que pasa a ser
expectativa. En sta ltima, que es la relacin que se produce entre el mdico y el
paciente, es la vctima la que debe probar la culpa, y no al revs, como en las
obligaciones de resultado. Que entonces uno de los presupuestos de la responsabilidad
en las obligaciones de medios, es la mala praxis en que el error de diagnstico no hace
responsable al mdico en la medida que haya agotado las posibilidades cientficas,
citando al efecto, un fallo de la Corte Suprema acerca del alcance de la obligacin de
medios a emplear por el mdico. Seguidamente se refiere a los hechos y a la forma
errada en que la sentenciadora los interpret. Concluye su recurso sealando que la
relacin de prestacin de servicios mdicos debe descartar la supuesta obligacin de
extraccin de quistes. Expone las razones por las cuales no se configuran los requisitos
de la responsabilidad civil por incumplimiento de contrato y se refiere tambin al protocolo
post operatorio en el cual se describi el acto mdico como un examen ginecolgico
endoscpico en limites normales, siendo necesario continuar con ciruga. Explica tambin
que la sentenciadora habra incurrido en un error en los Considerandos Duodcimo y
Dcimo Tercero al entender que parte de la base de una obligacin contrada que no se
poda cumplir, como es la extraccin de un quiste que se encontrara fuera de la cavidad
151
abdominal, lo que incluso constituye una infraccin a las leyes reguladoras de la prueba.
Concluye su recurso manifestando que el profesional asumi una obligacin de resultado,
que no hubo vulneracin de lex artis todo ello en relacin a la ponderacin de las
declaraciones de los testigos, expertos en el tema, que individualiza. 3.- Por su parte, la
demandante, tambin interpone recurso de apelacin en contra de la sentencia dictada en
aquella parte relativa a la suma ordenada pagar como indemnizacin, ya que manifiesta
que es insuficiente las sumas por concepto de dao moral y solicita elevarlas a treinta
millones de pesos en el caso de Mara del Pilar Braa Villagrn y cien millones de pesos
en el caso de Mara Victoria Daz Braa, o las sumas que determine esta Corte. Ello por
cuanto la indemnizacin debe ser una satisfaccin que se le otorga a la vctima, incluso
cita al efecto un fallo de sta Corte que menciona, y tambin de la Corte Suprema,
concluyendo que la indemnizacin debe ser equivalente al valor moral destruido ubicando
los criterios para su quantum, siendo stos, la entidad, naturaleza y gravedad del acto, el
dao sufrido, el inters patrimonial agredido, las consecuencias fsicas y psquicas como
el grado de reproche o culpabilidad del autor. En forma subsidiaria, solicita la aplicacin
de reajuste e inters. I.- En cuanto al recurso de casacin en la forma de la demandada,
4.- Que en cuanto a la causal prevista en el N 5 del artculo 768 del Cdigo de
Procedimiento Civil, que ha sido invocada por la parte demandada, la ha descrito por
cuanto la sentencia habra sido dictada por la juez a quo, con omisin del requisito del N
5 del artculo 170 del Cdigo de Procedimiento Civil, con omisin de las consideraciones
de hecho ya que en los Considerandos Primero a Tercero se limit a citar las pruebas sin
hacer una relacin lgica sobre su valor probatorio y sin hacer una apreciacin jurdica de
la declaracin de los doctores Wilfredo Diener Ojeda, Gloria Carreo Campos, Rodolfo
Espinoza Gonzlez, Jaime Garay Tosen, ello no es efectivo por cuanto la sentenciadora,
en el Considerando Noveno se refiere precisamente a las probanzas que seala el
recurrente el cual debe relacionarse con los Considerandos Duodcimo y Dcimo
Tercero, los cuales le permitieron llegar a una opinin contraria a la del recurrente, pero
ello no es causal de casacin.
Y vistos adems, lo dispuesto por los artculos 765, 766, 768, 783 y 806 del Cdigo de
Procedimiento Civil;
Que de acuerdo con lo expuesto precedentemente y por no adolecer la sentencia del vicio
anunciado por el recurrente, sino que de contar con ellos y desarrollados en forma clara,
el recurso de casacin en la forma intentado debe ser rechazado.
II.- E cuanto al recurso de apelacin de la demandada. 5.- Que en atencin a la
naturaleza del tema debatido, ste se aleja de las premisas generales de las relaciones
jurdicas contradas voluntariamente de aquellos contenidos de voluntad de orden civil o
comercial -campos en los cuales el legislador, como la doctrina, han sido prolficos- ya
que no resultan aplicables, amplia y directamente, ni sus normas, ni inicialmente al
menos, los principios, que rigen la responsabilidad civil del profesional conforme a los
artculos 2118 del Cdigo Civil, al menos en cuanto a que se ajusta a los trminos del
152
menor, Sra. Pilar Braa Villagrn, debido a que, como ella misma lo seala a fjs. dos (2)
de su demanda:
"Sin embargo estas (irregularidades) aparecieron cuando doa Pilar Braa Villagra,
.madre de la menor, se cambi de Isapre y en la nueva Isapre le solicitaron el resultado
de la biopsia por el tema de las enfermedades pre existentes y sta no apareca por
ninguna parte, como si nunca se hubiere ordenado ni tampoco ejecutado." por lo tanto, es
un hecho cierto que las llamadas irregularidades del profesional, segn las demandantes,
comenzaron a partir de la ocasin ya mencionada.
Esta afirmacin de las demandantes, permite deducir que fue la suscripcin de un nuevo
contrato de Salud Previsional -con una nueva Isapre- la que desato el rechazo a lo
actuado por el profesional, de parte de las demandantes. En efecto, las demandantes - la
madre de la paciente atendida- debi completar el formulario de "Declaracin de Salud"
para la nueva Isapre, debiendo responder el cuestionario declarando su estado de salud
y, en especial, las enfermedades preexistentes, que es un documento determinante en la
celebracin del contrato de salud, en donde se debe entregar toda la informacin sobre el
estado de la salud de la beneficiaria en donde hubo de informar acerca de su hija, y en el
"Listado Referencial de Enfermedades" se pide responder de las enfermedades y
patologas diagnosticadas mdicamente hayan o no requerido tratamiento, hospitalizacin
o intervencin quirrgica informando su estado actual, su recuperacin y cuando fue dada
d e alta, y es en ese momento en donde tiene que haber informado a la Isapre acerca de
la intervencin a que haba sido sometida su hija, segn su informacin. Cabe sealar que
de acuerdo al marco jurdico del sistema de salud nacional, mediante estos datos que se
exige informar, al ingresar al sistema, se autoriza a la Isapre para acceder a la
informacin mdica con el fin de evaluar el riesgo de salud comprometido para decidir si
acepta o no, asumir tomar el riesgo, y por ello, mientras la actora no completara
documentariamente la informacin acerca de la extirpacin de dos quistes en su hija -ya
que era esa la situacin que ella sabia que se haba efectuado- la Isapre no poda
cursaba su contratacin especialmente por el resultado de la biopsia es que requiri al
profesional, incluso anteriormente tambin le haba sido pedido, sin resultado.
7.- El tercer paso a determinar es si el profesional demandado utilizara la paraloscopia
con la finalidad que sealan las demandantes o de la forma como lo seala el
demandado. Para resolver este punto, primeramente debemos traer a colacin el alcance
del procedimiento mdico indicado, para quienes profesan dicha ciencia, mas que para la
opinin de los legos, y a respecto debemos ajustarnos a la definicin tcnica del
concepto, dando cumplimiento al artculo 21 del Cdigo Civil. Para ello hemos recurrido a
las definiciones de un diccionario tcnico de medicina, que es el mantenido por la
University of Maryland Medical Center en el sitio donde mantiene su Enciclopedia
Ilustrada de Salud, donde aparecen las siguientes explicaciones acerca del concepto:
Nombres alternativos
Ciruga de curitas; Laparoscopia; Pelviscopia
Definicin:
154
Obesidad severa
severas en la pelvis de otras cirugas
Se recurre a la laparoscopia cuando quiere practicarse una ciruga menos invasiva. Este
procedimiento tambin es llamado ciruga de la "curita" porque slo requiere que se
hagan pequeas incisiones que permitan la introduccin de los pequeos instrumentos
quirrgicos que se utilizan para observar los contenidos abdominales y realizar la ciruga.
Fecha de revisin: 9/19/2006
Versin en ingls revisada por: Audra Robertson, MD, Department of Obstetrics and
Gynecology, Brigham and Women's Hospital, Boston, MA. Review provided by VeriMed
Healthcare Network.
Traduccin y localizacin realizada por: DrTango, Inc.
De la lectura del texto transcrito, y de las explicaciones otorgadas por los profesionales las
que rolan de fjs. 152 en adelante, puede deducirse que el procedimiento de paraloscopa,
que fue el utilizado por el profesional demandado, tiene fines de diagnostico y tambin
teraputicos, es decir, con el fin de extraer materias. Pero es lgico entender " y as lo
explican los mdicos que declararon de fjs. 152 en adelante, que la funcin extractiva se
decide en la medida que se tiene conocimiento cierto de la necesidad de la ciruga, pero
no de antemano, mxime cuando hay informacin dudosa, y ocurre que los dos
profesionales que anteriormente atendieron a la menor "que era virgen- tenan dudas ante
las ecografas ya que ellas exhiban una imagen qustica en el ovario izquierdo que no
apareca estar incluida en el ovario, y ha quedado claro que, por las dudas que tenan los
profesionales que atendieron a la menor, la derivaron para ser atendida por el
demandado, dada su especialidad o experticia en el tema. Todo lo anterior aparece
confirmado por las declaraciones de los doctores Srs. Diener Ojeda de fjs. 152; Carreo
Campos, de fjs. 153 vta. y Espinoza Gonzlez, de fjs. 153 y Garay Ottesen de fjs.154;
incluso la testigo que declara a fjs. 155 Sra. Carmen Vargas Torres, que es la arsenalera
que particip en la intervencin. Todo lo anterior permite deducir, con seguridad, que el
profesional demandado "en atencin adems a su experticia- no pudo recomendar la
extirpacin de quistes, sin estar en pleno conocimiento de la procedencia de dicha
intervencin y que a su vez, el uso de la paraloscopa puede ser utilizada como
exploracin o extirpacin, lo cual debe decidirse cuando la intervencin se est
ejecutando en la medida que la visin del entorno lo recomiende. Por otra parte, y
conforme a lo expuesto en estrado, por parte de la defensa del profesional, y segn da
cuenta la documentacin que rola de fjs. 90 a fjs.93 el documento consistente en el
Protocolo Operatorio de la Clnica Alemana, que es donde se llev a efecto la
intervencin, entre todos los datos de la intervencin, registra como denominacin de la
prestacin realizada, el cdigo de Fonasa correspondiente al 2003031 que es el asignado
156
Regstrese y devulvase
Rol N 628-2008
Pronunciada por la Primera Sala.
Presidente Ministro Sr. Hctor Toro Carrasco, Ministro (S) Sr. Carlos Gutirrez Zavala y
Abogado Integrante Sr. Eduardo lamos Vera
158
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Dao Moral
C. Suprema
5.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
Sexto: Que sin perjuicio de lo anterior en relacin a la procedencia del dao moral en
sede contractual, esta Corte ha sustentado reiteradamente la doctrina de su pertinencia
en los fallos de 20 de octubre de 1994 y 16 de junio de 1997, publicadas en la Revista de
Derecho y Jurisprudencia Tomo 91, seccin primera, pgina 100 y Tomo 94, seccin
tercera, pgina 94, pero, en especial en las sentencias de esta Primera Sala Civil de la
Corte Suprema de fecha cinco de noviembre de dos mil uno, tres de septiembre de dos
mil dos, veintiocho de noviembre de dos mil seis, once de abril, tres de julio, veintiocho de
agosto y veinticuatro de septiembre de dos mil siete en curso, recadas en los ingresos rol
N 1.368-00, 4.035-01 N 320-05, N 3.291-05, N 3901-05, N 3750-05 y 4.103-05, que
representan una lnea jurisprudencial de los ministros que las suscriben.
REGLA .
a.- El artculo 1556 del C. Civ. no excluye la indemnizacin del dao moral en sede
159
contractual.
CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 26 enero 2009. M.J. N 19251. L.P N 41602.
160
Y teniendo en consideracin:
Asevera la demandada que la limitacin que nace del artculo 1556 del Cdigo Civil
concluye que el dao emergente y lucro cesante tienen un contenido esencialmente
patrimonial, de modo que no cabe en ellos la lesin que sufre un derecho
extrapatrimonial, a saber, que el contrato tiene como efecto establecer una relacin
puramente econmica entre los contratantes, por lo tanto, las consecuencias econmicas
de la inejecucin deben dar lugar a la responsabilidad contractual.
Expresa, adems la recurrente que tambin se han vulnerado los artculos 254 y 170 del
Cdigo de Procedimiento Civil, ello como consecuencia de la infraccin de derecho
esencial del precepto 1556 del Cdigo Civil indicado. Aade que la demanda y la
sentencia deben contener todos los requisitos generales de un acto procesal y los
especficos que se sealan en los artculos 254 y 170 referidos y, en la especie, no
obstante el actor ha descrito los hechos en los cuales funda su demanda de resolucin de
contrato con indemnizacin de perjuicios y deja claro que procede la aplicacin del
artculo 1556 del Cdigo sustantivo, de la simple lectura de la accin y de las sentencias
de primera y segunda instancia, las cuales dan lugar a la indemnizacin por dao moral,
aparece que se omite absolutamente hacer mencin al artculo 2329 del mismo cuerpo
legal, que habla de la reparacin integral del dao, regulada en materia de delitos y
cuasidelitos, de la responsabilidad extracontractual.
161
Finalmente sostiene que la resolucin impugnada atenta contra los principios generales
de nuestro ordenamiento jurdico y hace mencin a la interpretacin de la ley en sus
artculos 19, 20 y 22 del Cdigo Civil, desde que al momento de dictarse el fallo
censurado no fue considerado, para la aplicacin del texto del artculo 1556 del mismo
cuerpo legal, la claridad de la ley, el sentido natural y obvio de las palabras utilizadas en el
texto legal y la interpretacin de la norma conforme el contexto en el cual se encuentra
ubicada en el Cdigo Civil.
Segundo: Que para un adecuado anlisis de los errores de derecho planteados por la
recurrente, corresponde, en primer trmino, pronunciarse respecto de las infracciones a
los artculos 170 y 254 del Cdigo de Procedimiento Civil. El primero seala los requisitos
de las sentencias definitivas y el otro, regla las condiciones que exige la ley para que una
demanda sea apta. Ambas normas, por cierto, no son reguladoras de la prueba desde
que aquellos preceptos tiene indefectiblemente el carcter de ordenatorios litis, de modo
que su infraccin en caso de existir realmente, no puede servir de base para la
interposicin de un recurso de casacin en el fondo, puesto que reglan un aspecto
puramente formal relacionado con el contenido de la demanda y de la sentencia,
respectivamente, como se seal precedentemente.
162
A su vez, los jueces del fondo, al dictar la resolucin que se censura fijaron como hechos
de la causa, a los que tambin habr de estarse para su definicin y decisin, que los
perjuicios ocasionados por la demandada al demandante por concepto de dao
emergente ascienden a la suma de $10.700.000; por lucro cesante a $137.000.000 y, por
dao moral, a la cantidad de $15.000.000.
Cuarto: Que del tenor del libelo que contiene la casacin en estudio se advierte que el
recurrente no objeta propiamente la aplicacin del derecho atinente a la materia sino que,
en definitiva, lo que est reprochando es la forma o manera en que fuera pronunciado
aquel fallo y, adems, de la sentencia cuyo cumplimento se ha demandado, captulos
stos que no corresponde a la naturaleza del recurso intentado.
As se advierte que los cuestionamientos esenciales del recurso dicen relacin con el
alcance y sentido que corresponde conferir a la prueba rendida tanto en el proceso
principal, como en la etapa de cumplimiento. Sin embargo, tal actividad se agot con la
determinacin que, a este respecto hicieron los jueces del fondo, quienes -en uso de sus
facultades privativas- dejaron determinado primeramente en el fallo cuyo cumplimiento se
persigue, la procedencia de la indemnizacin demandada y los conceptos que aqulla
abarca y luego, en la sentencia que se reprocha, la especie y monto de dicho
resarcimiento, cuya concurrencia adems, no corresponde se vuelva a discutir.
Quinto: Que con relacin a la crtica que se hace valer por haberse concedido la
indemnizacin por dao moral que estima improcedente en este caso al no estar la
situacin contractual en la situacin de un riesgo que haya asumido natural o
convencionalmente el deudor, es lo cierto que en este juicio tiene slo ese sentido
instrumental en los trminos del artculo 173 del Cdigo de Procedimiento Civil ya que se
trata de la ejecucin de una sentencia que declar resuelto con indemnizacin de
perjuicios el contrato que ligaba a las partes y, en la que se decidi que la demandada era
responsable de resarcir los perjuicios materiales y morales causados con motivo del
incumplimiento. Ha sealado el referido fallo: "Que ha consecuencia del incumplimiento
del contrato celebrado entre las partes por la demandada, el actor sufri perjuicios
materiales y morales." (considerando sexto letra d.-)
primer grado, con los antecedentes de juicio que se consignan en el considerando cuarto
del fallo censurado, que permiti regular prudencialmente la entidad del sealado
perjuicio, cuestiones que resultan inamovibles para este Tribunal de Casacin, toda vez
que sobre el punto no se indican violadas leyes reguladoras de la prueba y porque en lo
discrecional de los jueces del grado no cabe error de derecho impugnable por esta va.
Sexto: Que sin perjuicio de lo anterior en relacin a la procedencia del dao moral en
sede contractual, esta Corte ha sustentado reiteradamente la doctrina de su pertinencia
en los fallos de 20 de octubre de 1994 y 16 de junio de 1997, publicadas en la Revista de
Derecho y Jurisprudencia Tomo 91, seccin primera, pgina 100 y Tomo 94, seccin
tercera, pgina 94, pero, en especial en las sentencias de esta Primera Sala Civil de la
Corte Suprema de fecha cinco de noviembre de dos mil uno, tres de septiembre de dos
mil dos, veintiocho de noviembre de dos mil seis, once de abril, tres de julio, veintiocho de
agosto y veinticuatro de septiembre de dos mil siete en curso, recadas en los ingresos rol
N 1.368-00, 4.035-01 N 320-05, N 3.291-05, N 3901-05, N 3750-05 y 4.103-05, que
representan una lnea jurisprudencial de los ministros que las suscriben. Los fundamentos
expresados para sostener la procedencia del dao moral en tales fallos, se pueden
resumir en las siguientes argumentaciones, segn se ha dejado consignado en el
considerando trigsimo primero del ltimo de aquellos:
"1.- Aplicacin literal del artculo 1556 del Cdigo Civil. El marco restrictivo que imperaba
en las indemnizaciones en el mbito contractual y que naca de la aplicacin literal del
artculo 1556 del Cdigo Civil, tuvo su principal sostenedor y defensor en el profesor
Arturo Alessandri, cuyo criterio sobre la improcedencia del dao moral en materia
contractual, se mantuvo casi inalterable en las sentencias de los tribunales de justicia
hasta aos recientes. En el mbito contractual se consider que la indemnizacin por
daos extrapatrimoniales no era posible y aceptable y ello porque se entendi que el texto
del artculo 1556 se refera nicamente a daos patrimoniales, o perjuicios pecuniarios, lo
que no es as, pues no existe referencia a tal restriccin o calificacin en el texto del
artculo.
2.- Nueva doctrina jurisprudencial. El criterio de marco rgido evolucion y como ejemplo
de este cambio, se encuentra la sentencia de 20 de octubre de 1994 de esta Corte
Suprema, que rechaza un recurso de casacin de fondo deducido por una institucin
bancaria que impugna la aceptacin del dao moral en sede contractual, decisin que se
une a otros fallos de esta Corte en el mismo sentido, de 3 de julio de 1951 y de 14 de abril
de 1954, dictadas en recursos de casacin de fondo (Rev. de D. y J. tomo 91, pgs. 100 a
105).
164
3.- El legislador acepta el dao moral. No se ha excluido el dao moral por el legislador.
La norma del artculo 1556 del Cdigo Civil no excluye el dao moral, como tampoco
dispone que la indemnizacin slo comprenda o abarque los rubros de dao emergente y
lucro cesante. En efecto, no podra excluir el dao moral, puesto que la ley no ha
prohibido que la indemnizacin por dao moral pueda invocarse fuera del mbito de los
delitos o cuasidelitos, por el contrario, el artculo 544, en relacin con el 539 y el 1544 del
Cdigo Civil, posibilitan esa clase de reparacin de daos no patrimoniales, el uno en las
relaciones de familia y el otro en el rea de las convenciones.
4.- Concepcin del dao emergente.- Las nuevas doctrinas sobre el resarcimiento del
dao moral, derivado del incumplimiento de contratos, entiende que el concepto de "dao
emergente", que emplea la norma del artculo 1556 del Cdigo Civil, comprende no
solamente el dao pecuniario sino tambin el extrapatrimonial o moral. Esta interpretacin
que no slo es posible, sino que plenamente aceptable en su texto actual del mencionado
artculo, primero porque la voz "dao" que emplea la disposicin y que no se encuentra
definida en la ley, corresponde, segn el Diccionario de la Real Academia de la Lengua
Espaola, a todo "detrimento, perjuicio, menoscabo, dolor o molestia", es decir, a toda
privacin de bienes materiales, inmateriales o morales y, porque, como antes qued
consignado, lo preceptuado en el citado artculo no excluye la consideracin de otros
perjuicios que no sean slo los materiales.
5.- Aceptacin por la doctrina.- Los estudiosos del Derecho, como parte de la
jurisprudencia, recientemente han ido aceptando el resarcimiento del dao moral en los
casos de incumplimiento de obligaciones contractuales. El profesor Fernando Fueyo
Laneri en su obra "Instituciones de Derecho Civil Moderno" afirma: "Para mi es como un
axioma que el concepto jurdico de daos abarca toda forma de daos, esto es, tanto el
patrimonial como el extramatrimonial", agregando que "la jurisprudencia chilena ha tenido
la oportunidad de recalcar que la palabra `dao" comprende el perjuicio, dolor o molestia
que se cause, por lo cual, interpretando este vocablo en su sentido natural y obvio, debe
entenderse que corresponde, adems del perjuicio pecuniario, el de carcter inmaterial
que se ocasione por acto ajeno" (pgina 69). Sostiene que siendo el dao por esencia
patrimonial y extrapatrimonial, del mismo modo el dao moral juega tanto en la
responsabilidad extracontractual como en la contractual (pgina 71). Otros autores
nacionales participan del mismo parecer, como Leslie Tomasello Hart, en su estudio sobre
"El Dao Moral en la Responsabilidad Contractual" (Editorial Jurdica, 1969); Ren
Abeliuk Manasevich, Las Obligaciones, Tomo II, N 892, pginas 789 y 790; Ramn
Domnguez guila en sus "Consideraciones en torno al dao en la responsabilidad civil.
Una visin comparatista" (Revista de Derecho Universidad de Concepcin, N 188, 1990);
Ramn Domnguez Benavente en Comentarios de Jurisprudencia (publicada en la antes
citada revista universitaria N 198) y recientemente doa Carmen Domnguez Hidalgo en
su obra "El Dao Moral" (Editorial Jurdica ao 2000). Estableciendo ciertas diferencias,
165
tambin comparte esta procedencia Enrique Barros Bourie, en su obra antes citada,
pginas 335 a 345.
6.- Igualdad ante la ley. La sentencia de esta Corte de octubre de 1994, expresa al
respecto que los bienes extrapatrimoniales de una persona, como el honor y la fama,
tienen un valor que de ordinario sobrepasa el de los bienes materiales " con mayor razn
si se trata de la salud o la integridad fsica o psquica ", y agrega que si la jurisprudencia
ha dado cabida desde hace tiempo a la indemnizacin exclusivamente moral respecto de
los perjuicios o daos causados por un delito o cuasidelito civil, no se divisa el motivo que
justifique que se la niegue si la lesin a esos intereses extrapatrimoniales procede de la
defeccin culpable o maliciosa de uno de los contratantes. Donde existe la misma razn
debe existir la misma disposicin."
Una interpretacin contraria mantiene una desigualdad injustificada y por lo tanto puede
constituir una discriminacin arbitraria, por la falta de fundamentos de esta diferencia, que
a lo ms llega a sustentarse sobre la base de una interpretacin exegetita y literal, puesto
que en el rgimen del Cdigo Civil, al regular la responsabilidad extracontractual se
dispone que, por regla general, se indemniza "todo dao", segn reza el artculo 2329, al
igual que en responsabilidad contractual, en el evento que se impute dolo o culpa grave,
que equivale al dolo, en el incumplimiento contractual, al sealar el artculo 1558 que en
ese evento se responde de "todos los perjuicios". De lo anterior se sigue que el dao
moral se encontrara excluido nicamente en sede contractual cuando la ley exija culpa
leve o levsima para justificar la responsabilidad de la parte incumplidora. Incluso tal
procedencia puede verse ampliada a todo evento en que, existiendo perjuicios morales,
una de las partes pruebe la concurrencia de hechos que permitan ser calificados de culpa
grave o dolo en el incumplimiento de otra de las partes, puesto que la ley no ha impedido
esta posibilidad, de tal forma que la diferencia descansara ms que en la ley en la
posibilidad que tengan las partes de aportar antecedentes fcticos que permitan
calificarlos en el sentido indicado y si se quiere extremar el argumento, la distincin
pasara a radicar en la decisin concreta de los tribunales al efectuar la calificacin de la
culpa. Lo injustificado de la diferencia anotada queda de manifiesto precisamente en
materias propias de la responsabilidad mdica, pues ante la posible opcin de
responsabilidades, resulta ms beneficioso en la extensin del dao accionar por la va
extracontractual, por la limitacin que contemplara la legislacin en sede contractual, sin
que exista fundamentacin plausible que avale tal distincin. Esta visin integral del
Derecho lleva a superar la exclusin del dao moral en la responsabilidad contractual,
limitando su procedencia a la justificacin del mismo en los casos concretos de que se
trata."
167
De conformidad, adems, con lo dispuesto en los artculos 764 y 767 del Cdigo de
Procedimiento Civil, se rechaza el recurso de casacin en el fondo interpuesto en lo
principal de fojas 449, por la abogada Sra. Mara Lorena Martini Martini, en representacin
de la parte demandada, en contra de la sentencia de la Corte de Apelaciones de
Valparaso, de fecha veintitrs de julio de dos mil siete, que se lee a fojas 447 y siguiente.
Se previene que el Ministro Sr. Juica no comparte el motivo sexto que antecede,
considerando que las dems argumentaciones son suficientes para desestimar el recurso
intentado.
Rol N 5329-07.
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema por los Ministros Sres. Milton Juica
A., Sergio Muoz G., Sra. Margarita Herreros M., Sr. Juan Araya E. y Sr. Guillermo Silva
G.
168
Tribunal
C. Santiago
Considerando
1, 4 y 6.
170
regula la letra de cambio y pagar, las acciones cambiarias para cobrar el documento se
encontraran prescritas, toda vez que a la fecha de notificacin del requerimiento de pago,
el da 15 de abril de 2005, habra transcurrido ms de un ao desde que el deudor se
constituy en mora, el da 11 de agosto de 2003, cuando dej de pagar la tercera cuota.
4. Que conforme se expresa en el Pagar acompaado en autos, las partes convinieron
una clusula de aceleracin que se encuentra redactada en forma facultativa, por lo que
estando establecida en beneficio del acreedor, no basta que el deudor deje de pagar una
o ms cuotas para que se produzca ipso facto la caducidad del plazo y comience a correr
la prescripcin como ocurre en las clusulas imperativas sino que es necesario,
adems, que el acreedor manifieste su voluntad de hacer valer la referida clusula,
oportunidad a partir de la cual se hace exigible la obligacin y comienza a correr el plazo
de prescripcin.
5. Que, en la especie, se entiende que el acreedor ha exteriorizado su voluntad de hacer
uso de la clusula de aceleracin, con la presentacin de la demanda a distribucin de la
Corte de Apelaciones de Santiago, el 6 de septiembre de 2004, lo que produjo el efecto
de hacer caducar el plazo de aquellas cuotas que a esa fecha se encontraban pendientes
de pago (septiembre de 2004 a mayo de 2005), hacindolas exigibles y comenzando a
correr el plazo de prescripcin para su cobro, el que se interrumpi al notificar la demanda
al deudor con fecha 15 de abril de 2005.
6. Que, sin embargo, la clusula de aceleracin no puede ser utilizada para extender o
revivir el plazo de prescripcin que hubiere operado respecto de aquellas cuotas que
vencieron conforme al plazo originalmente convenido para su pago, ya que si bien el
acreedor est facultado para hacer exigible el total de la obligacin cuando estime
conveniente, y no necesariamente cuando el deudor caiga en mora en el pago de una
cuota determinada, no puede pretender dotar a la clusula de un efecto jurdico distinto al
que posee y que no es otro que el de acarrear la caducidad convencional del plazo, esto
es, adelantar la exigibilidad del trmino inicialmente convenido, transformando la
obligacin que an se encontraba sujeta a plazo, en una pura y simple.
7. Que, as las cosas, habindose interrumpido la prescripcin con fecha 15 de abril de
2005, con la notificacin de la demanda, las cuotas que vencieron en los meses de
agosto, septiembre, octubre, noviembre y diciembre de 2003, as como las que vencieron
en los meses de enero, febrero, marzo y 12 de abril de 2004, se encuentran prescritas, al
haber transcurrido el plazo de un ao, contemplado en el artculo 98 de la Ley 18.092, sin
que se hubieran ejercido las acciones de cobro correspondientes.
Por estos fundamentos, disposiciones legales citadas y lo dispuesto en los artculos 107
de la ley 18.902 y 186 y siguientes del Cdigo de Procedimiento Civil, se revoca la
sentencia de diez de agosto de dos mil cinco, escrita a fojas 56, en cuanto acoge
ntegramente la excepcin de prescripcin opuesta por el demandado en lo principal de
fojas 23 y, en su lugar, se declara que se la acoge slo con respecto a las cuotas que
vencieron con fecha 11 de agosto, 10 de septiembre, 10 de octubre, 10 de noviembre y 10
de diciembre de 2003 y de las que vencieron con fecha 12 de enero, 10 de febrero, 10 de
marzo y 12 de abril de 2004, debiendo darse curso a la ejecucin con respecto a las
cuotas restantes.
En lo dems, se confirma la sentencia apelada.
171
172
Tema Clave
Fuerza Obligatoria
Contrato.
Tribunal
del C. Suprema
Considerando
8.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
OCTAVO: Que de este modo, al haberse acogido la demanda de cobro de honorarios,
considerando una forma de pago no prevista en el contrato celebrado por las partes, esto
es, la cesin del diez por ciento de los derechos que la demandada, doa Sonia del
Carmen Torres tiene sobre la Parcela Nmero Uno y Sitio Nmero Cinco del Proyecto de
Parcelacin Campo Nuevo, ubicado en la comuna de Coihueco, al actor, los jueces del
fondo han cometido error de derecho al infringir el artculo 1545 del Cdigo Civil, error que
ha influido sustancialmente en lo dispositivo de la sentencia, lo que llevar a esta Corte a
acoger la nulidad de fondo deducida.
173
REGLA .
a.- Al acogerse en la demanda de cobro de honorarios una forma de pago no prevista en
el contrato celebrado por las partes, los jueces del fondo han cometido error de derecho
que infringe el artculo 1545 del cdigo civil.
4. CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 17 marzo 2009. M.J. N 19614.
cuyo dominio se encontraba inscrito a fojas 3423 N 2996 en el Registro de Propiedad del
Conservador de Bienes Races de Chilln, correspondiente al ao 2003.
En contra de esta ltima sentencia, la demandada deduce recurso de casacin en el
fondo.
Se trajeron los autos en relacin.
Considerando:
Primero: Que el recurrente, al deducir la nulidad de fondo, sostiene que el fallo que se
impugna ha sido pronunciado con infraccin de ley segn se pasa a explicar: a) Estima
infringido el artculo 1569 en relacin con los artculos 959 y 988 inciso 1 del Cdigo Civil,
toda vez que el artculo 1569 seala que el pago se har bajo todos los respectos en
conformidad al tenor de la obligacin, lo que implica que para cumplir la obligacin el
deudor debe ejecutar la prestacin debida y no otra diversa, de modo que el acreedor no
podr ser obligado a recibir una cosa distinta a la que se le deba, ni an a pretexto de ser
igual o mayor valor la ofrecida. Del mismo modo al deudor no podr forzrsele a pagar
otra cosa que la que se deba.
En el caso de autos, refiere, el inmueble sali del patrimonio hereditario, fue enajenado
como parte de las gestiones del actor de suerte tal que no puede pretenderse que lo que
no est en el patrimonio hereditario deba quedar precisamente dentro de l para pagar el
precio del valor pactado.
Explica que se han infringido las normas sealadas, por cuanto la sentencia lo condena a
ceder el 10% de los derechos sobre la Parcela nmero 1 y Sitio nmero 5, inmuebles que
fueron enajenados por la sucesin, por lo cual no es t en el patrimonio de la misma.
A continuacin, en el recurso se expone, que es un hecho no controvertido que la
sucesin qued con muchas deudas y parte de lo que deba gestionar el actor era el pago
de las mismas, para ello fue necesario vender inmuebles de la sucesin, de modo que lo
que pudo disponer libremente la sucesin fue el precio de los inmuebles sub lite, pero no
de ello.
b) Tambin estima vulnerados los artculos 1700 y 1698 del Cdigo Civil en relacin con
el 1545 del mismo estatuto jurdico. La infraccin al artculo 1698 del citado cdigo se
produce, toda vez que el fallo seala que no est determinado el valor del patrimonio
hereditario del causante y pese a no estarlo, ordena el pago del 10% de los derechos
supuestamente subsistentes para la demandada Torres Orellana, es decir hay un
presupuesto respecto de la obligacin que no se prob.
En cuanto a la transgresin al artculo 1700 del Cdigo de Bello, indica que en la escritura
pblica de compraventa e inscripcin de dominio consta que el valor del inmueble cuya
cuota se reclama, fue de diez millones, con lo cual al trmino de las gestiones del actor, 5
de agosto de 2003, ingres a la sucesin esa suma de dinero, con lo cual yerra la
sentencia al sealar que el valor del patrimonio hereditario no se encuentra probado, por
lo que se debi dar lugar a la peticin principal del litigante, en su parte no prescrita.
175
3.- Finalmente considera infringido el artculo 1485 del Cdigo Civil en relacin con los
artculo 1473, 1698 y 1700 del Cdigo antes citado e indica que al no aplicar dichas
normas, los jueces no establecen la naturaleza de la obligacin contrada y, en
consecuencia, tampoco demuestran el cumplimiento de los requisitos de procedencia en
cuanto al fondo, esto es, si existe obligacin o no existe.
Segundo: Que para la adecuada inteligencia del recurso en estudio, deben tenerse
presente las siguientes circunstancias que dicen relacin con el proceso:
a) Que don Jorge Molina Inostroza fundamenta su accin en que la demandada Sonia del
Carmen Orellana, por s y en representacin de la sucesin de don Abraham Galaz
Garca le encarg realizar todas las gestiones, trmites, juicios y en general todos los
asuntos relacionados con la sucesin de don Abraham Galaz Garca, con el objeto de
pagar las deudas y conservar el patrimonio hereditario hasta donde fuera posible. Seala
que el honorario pactado fue la suma de $ 4.500.000 a todo evento, de los cuales slo se
pag $ 1500.000 y el 20% de lo que se conservara en el patrimonio hereditario del que se
pudiera disponer. Aade que se ocup de mltiples gestiones judiciales y extrajudiciales
hasta culminar con una transaccin con el banco BCI, que les permiti conservar y
disponer libremente de la Parcela Uno y Sitio Nmero Cinco del Proyecto de Parcelacin
Campo Nuevo, ubicado en la comuna de Coihueco, de una superficie de 25,9 hs e
inscrita a nombre de la demandada Torres Orellana.
b) doa Sonia del Carmen Orellana al evacuar el trmite de la contestacin de la
demanda, reconoce el encargo y las gestiones hechas por el actor, pero precisa que lo
que se conserv del patrimonio del causante al trmino de los trmites fue la suma de
diez millones de pesos, que corresponde al producto de la venta del predio agrcola
denominado Parcela Uno y Sitio Nmero Cinco del Proyecto de Parcelacin Campo
Nuevo, ubicado en la comuna de Coihueco, que fue adquirido por la demandada en su
calidad de persona natural. Aade que siendo tres los demandados- esto es, ella y la
sucesin de don Abraham Galaz Garca, compuesta por sus dos hijos Luis y Yamelline
Galaz Torres- slo le corresponde pagar el 33,3% del 20% pactado sobre la cantidad de
diez millones de pesos que es lo que se conserv del patrimonio hereditario del causante.
c) los demandados Luis y Yamelline Galaz Torres opusieron la excepcin de prescripcin
prevista en el artculo 2521 inciso segundo del Cdigo Civil, la que fue acogida por los
jueces del grado. d) por instrumento privado de 19 de junio de 2001, entre doa Sonia del
Carmen Torres Orellana por s y en representacin de la sucesin de don Abraham Galaz
Garca compuesta por sus hijos Luis y Yamelline Galaz Torres y don Jorge Molina
Inostroza celebraron un contrato de cuota litis, en cuya clusula segunda se pact: "La
clienta pagar como nico honorario la cantidad de $ 4.500.000, a todo evento, dentro del
plazo de noventa das a contar de esta fecha y el veinte por ciento de lo que se obtenga,
es decir, de lo que se conserve en el patrimonio hereditario de que se pueda disponer
libremente"
Tercero: Que los jueces del grado para acoger la demanda en la forma que se rese en
lo expositivo de este fallo, sealaron: "Que las partes del contrato de honorarios
acompaado por el apoderado de la demandada a fojas 36, no objetado, son por un lado
como acreedor, el demandante don Jorge Molina Inostroza y por el otro como deudores,
la demandada doa Sonia del Carmen Torres Orellana y la sucesin de don Abraham
176
Jess Galaz Garca compuesta por sus hijos doa Yamelline del Rosario y Luis Robin
Galaz Torres.
Que no consta en dicho pacto de honorarios que entre los deudores se hubiese pactado
solidaridad, por lo que la obligacin contrada debe considerarse simplemente conjunta o
mancomunada y por ende, cada parte deudora debe responder del cincuenta por ciento
de la deuda, por cuanto la accin de cobro de honorarios est prescrita respecto de los
demandados Galaz Torres.
Que como no se encuentra determinado el valor de este patrimonio corresponde dar lugar
a la peticin subsidiaria de la demanda, esto es, el equivalente al diez por ciento de los
derechos subsistentes para la demandada Torres Orellana."
Cuarto: Que en mrito de los antecedentes los jueces del grado decidieron acoger la
demanda del modo que se seal en la parte expositiva de esta sentencia, esto es, que la
demandada doa Sonia del Carmen Torres Orellana debe ceder al demandante don
Jorge Molina Inostroza el diez por ciento de los derechos sobre la Parcela Nmero Uno y
Sitio Nmero Cinco del Proyecto de Parcelacin Campo Nuevo, ubicado en la comuna de
Coihueco cuyo dominio se encuentra inscrito a fs. 3423 Nro. 2996 en el R egistro de
Propiedad del Conservador de Bienes Races de Chilln, correspondiente al ao 2003.
Quinto: Que en relacin a la infraccin al artculo 1545 del Cdigo Civil, ha de tenerse
presente que dicho precepto sienta el principio por el cual se le da realce a la autonoma
de la voluntad en cuya virtud opera "La libertad de que gozan los particulares para pactar
los contratos que les plazcan, y de determinar su contenido, efectos y duracin", como lo
admite el Profesor Arturo Alessandri en su clsica obra sobre "Los Contratos".
El autor Jorge Lpez Santa Mara sobre esta materia comenta que: "El principio de la
autonoma de la voluntad es una doctrina de filosofa jurdica segn la cual toda obligacin
reposa esencialmente sobre la voluntad de las partes. Esta es, a la vez, la fuente y la
medida de los derechos y de las obligaciones que el contrato produce", como lo admite en
su texto sobre Los contratos, Parte General. Siendo esto as, quiere decir que la
autonoma de la voluntad se funda en los principios propios de la ilustracin de la libertad
y de la igualdad, que llevados ambos al plano jurdico, se traducen en igualdad y la
libertad jurdica de las partes. La libertad jurdica se divide, a su vez, en la libertad para
contratar, que es la libertad para celebrar o no el contrato y con quien, y la libertad
contractual, que es la libertad para fijar los trminos o contenidos del contrato.
Sexto: Que en la especie y segn se dej establecido en la letra d) del considerando
segundo que precede, las partes en virtud del principio de la autonoma de la voluntad
celebraron un "contrato de cuota litis", en los trminos que en el citado fundamento se
indica.
Sptimo: Que es un hecho pacfico y en consecuencia incontrovertido que el actor realiz
exitosamente las gestiones encomendadas y que en el pacto de honorarios los
demandados se obligaron a pagar, a ms de la cantidad de $ 4.500.000, el veinte por
ciento de lo que se obtenga, es decir de lo que se conserve en el patrimonio hereditario
de que se pueda disponer libremente.
177
Segundo: Que no consta en dicho pacto de honorarios que entre los deudores se hubiese
pactado solidaridad, de modo que la obligacin contrada debe considerarse simplemente
conjunta y por ende, cada parte deudora debe responder del cincuenta por ciento de la
deuda y encontrndose la accin de cobro de honorarios prescrita respecto de los
demandados Galaz Torres, incumbe a la demandada Torres Orellana concurrir al pago
del cincuenta por ciento de lo estipulado, esto es, el diez por ciento del valor del inmueble
consistente en la Parcela Nmero Uno y Sitio Nmero Cinco del Proyecto de Parcelacin
Campo Nuevo, ubicado en la comuna de Coihueco inscrito a fs. 3423 Nro. 2996 en el
Registro de Propiedad del Conservador de Bienes Races de Chilln, correspondiente al
ao 2003.
Tercero: Que corresponde determinar a cuanto asciende el diez por ciento del valor del
inmueble sub judice. Al efecto cabe puntualizar, que si bien la Corte de Apelaciones de
Chilln, mediante sentencia de tres de octubre de dos mil cinco y segn se lee a fojas 97
vuelta invalid de oficio la sentencia de trece de enero del mismo ao, reponiendo la
causa al estado de emplazarse vlidamente a los miembros de la sucesin Galaz Garca,
dicha resolucin no afect las diligencias, actuaciones ni probanzas vlidamente
realizadas, como la prueba pericial decretada en autos.
Para determinar la tasacin de la Parcela N1 y Sitio N5 se design un perito quien tas
la propiedad de una superficie de 28.77 hectreas con 20 acciones de regado y con 3,01
hectreas destinadas a otros usos no productivos y un rea destinada al paso del canal,
embalse Coihueco y 2,56 hectreas de aromos, estableciendo un valor comercial para la
parcela N1 y sitio N5 en la cantidad de $ 86.972.645 siendo el avalo fiscal de $ 27.
906.919.
Cuarto: Que establecido el valor del inmueble de marras, corresponde acoger la demanda
slo en cuanto la demandada, seora Sonia Torres Orellana deber pagar al actor el
equivalente al 10% de la tasacin de la Parcela Nmero Uno y Sitio Nmero Cinco del
Proyecto de Parcelacin Campo Nuevo, ubicado en la comuna de Coihueco, equivalente
a la cantidad de ocho millones seiscientos noventa y siete mil doscientos sesenta y cuatro
pesos. ($ 8.697.264)
Y visto, adems, lo dispuesto en los artculos 144 y 186 del Cdigo de Procedimiento
Civil, se declara:
a) Que se confirma la sentencia de catorce de marzo de dos mil seis, escrita de fojas 134,
con declaracin de que la demandada, SEORA Sonia Torres Orellana deber pagar al
actor la cantidad de ocho millones seiscientos noventa y siete mil doscientos sesenta y
cuatro pesos. ($ 8.697.264), con el reajuste correspondiente a la variacin del I.P.C. entre
el mes en curso y el que anteceda al del pago efectivo.
b) Que cada parte pagar sus costas.
Redaccin a cargo del ministro seor Juan Araya E.
Regstrese y devulvase, con sus agregados.
N 6914-07.-
179
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema por los Ministros Sres. Milton Juica
A., Sergio Muoz G., Sra. Margarita Herreros M. y Sres. Juan Araya E. y Guillermo Silva
G.
180
Tribunal
C. Suprema
Considerando
2 y 8
C. Suprema
C. Suprema
8.
10.
constituye un hecho de la causa, dado que los jueces del fondo lo establecen como fruto
de la valoracin de las probanzas rendidas, y por ende, en cuanto a tal, no es susceptible
de alterarse por la va del recurso de casacin en el fondo y, por el contrario debe
mantenerse inamovible cuando no hay una vulneracin de las normas reguladoras de la
interpretacin de los contratos, debiendo considerarse adems que mientras no se afecte
con ello el verdadero sentido y alcance de los mismas, no es un asunto susceptible de ser
revisado por esta va.
Voto Disidente Ministro Muoz.
3.- Que indudablemente queda dentro de la competencia de la Corte de Casacin la
revisin de la calificacin jurdica de los hechos, la determinacin del carcter legal de los
mismos, como de las disposiciones legales aplicables y los efectos que de tales normas
derivan para el caso concreto, por cuanto "lo que le corresponde ver a la Corte de
Casacin es si establecido un hecho cualquiera" ste "rene los caracteres o requisitos
fijados por la ley para que produzca un efecto determinado, y ver si las consecuencias
jurdicas que los jueces sentenciadores han sacado de los hec hos constatados
soberanamente, estn ajustadas a derecho, o por el contrario si se han negado a admitir
las consecuencias que de ellos se deducen" (J. F. Infante D., obra citada, pgina 100).
5.- () Enunciado lo que es el principio del respeto al proceder individual y que obrar
contra acto propio no vale, la interpretacin autntica se presenta como una de las de
mayor importancia. Subrayando su capital importancia los autores chilenos, Claro Solar,
por ejemplo, estiman que en un eventual orden de prelacin, ella debera figurar
inmediatamente a continuacin del artculo 1560. "La interpretacin autntica es la reina
de todas las interpretaciones y no hay que creer a aquellos tratadistas que rechazan esa
especie de interpretacin en materia contractual. Tal error nace de la mala aplicacin de
un principio muy verdadero, el cual dice que despus de concluido el contrato, ninguna de
las partes tiene libertad para modificar a su capricho la voluntad ya declarada e
interpretarlo a su guisa. Pero este principio no es, ciertamente, acatado, si las dos partes
se ponen de acuerdo para interpretar su voluntad".En la hermenutica de los contratos, la
inteligencia, el sentido que le dan los contratantes es el faro ms seguro para conocer la
voluntad". Interpretando autnticamente, la Corte Suprema ha dicho: "La regla del inciso 3
del artculo 1564 es de importancia principalmente en la interpretacin de los contratos
que contienen obligaciones de dar o hacer, ya que nada puede indicar con ms acierto la
voluntad de las partes en esta materia que la ejecucin llevada a cabo por ellos mismos
de las cosas que, con arreglo a lo pactado, estaban obligadas a dar o hacer". (Jorge
Lpez Santa Mara, op. cit. pgina 96).
REGLA .
a.- El incumplimiento de la obligacin de no hacer se resuelve en la de indemnizar los
perjuicios, si no pudiere deshacerse lo hecho. Si se funda en este caso el recurso en la
improcedencia de la indemnizacin de perjuicios al no haber pedido la resolucin o el
cumplimiento del contrato con indemnizacin de perjuicios, atento lo dispuesto en el
artculo 1489 del Cdigo Civil, este debe ser rechazado (C. 2 y 8)
.
b.- La actividad interpretativa del contrato es por regla general competencia exclusiva de
los tribunales de instancia, dado que los jueces del fondo la realizan de acuerdo a la
valoracin de las pruebas rendida, siendo solo susceptible de revisin en Casacin
aquellos casos excepcionales en que se vulneren las normas relativas a su interpretacin,
182
debiendo considerarse adems que mientras no se afecte con ello el verdadero sentido y
alcance de los mismas, no es un asunto susceptible de ser revisado por va de casacin.
Voto Disidente Ministro Sergio Muoz.
a.- Debe distinguirse en la actividad jurisdiccional la determinacin de la existencia de un
contrato (cuestin de prueba), su sentido y alcance (cuestin de interpretacin) y su
calificacin jurdica (determinacin del carcter legal de los mismos, como de las
disposiciones legales aplicables y los efectos que de tales normas derivan para el caso
concreto), siendo esta ltima la actividad clmine, en donde se aplica el derecho y que por
tanto debe ser susceptible de revisin por el Tribunal de Casacin.
b.- Dentro de los distintos principios interpretativos de los contratos que nos entrega el
C.Civ., y pese a que este no fija ningn orden de prelacin, la interpretacin autntica
establecida en el artculo 1564 del mismo cdigo, es sin duda la ms importante ya que
en ella las partes se ponen de acuerdo en interpretar su voluntad. As lo han sostenido
importantes autores chilenos como tambin la Corte Suprema.
4. CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 23 marzo 2009. M.J. N 19726
Texto completo de la Sentencia
Corte Suprema
Fallo:
El recurrente sostiene que los artculos 4 y 5 del DFL 707, establecen el procedimiento
por el cual todo banco debe cumplir su obligacin de comunicar, es decir, de rendir
informe del saldo de una cuenta corriente, a su comitente y la obligacin de este de
reconocer dichos informes.
La prctica bancaria ha hecho, dice, que aquella obligacin se cumpla a travs de las
cartolas de los movimientos que registran las cuentas corrientes y al cabo de 30 das en
que el correo certifique la carta que contenga los saldos, caduca el plazo para objetar o
reclamar frente al banco por el saldo reflejado.
Sin perjuicio de lo anterior, el artculo 4 del mismo estatuto jurdico deja a salvo el
derecho del cliente para requerir la rectificacin de los errores, omisiones, partidas
duplicadas, la determinacin judicial de los saldos u otros vicios por la va del juicio
sumario y a travs de los informes de peritos contables. En este caso tiene un plazo de
prescripcin dos aos para impugnar y hacer determinar por va judicial dicho saldo, el
que se cuenta desde el balance. Manifiesta que la Ley sobre Cuentas Corrientes
Bancarias y Cheques contiene un plazo especial de prescripcin de dos aos para la
impugnacin de todo cargo que se efecte en el contrato de cuenta corriente bancariaque es precisamente el contrato respecto del cual se alega su incumplimientomodificando la regla general en materia de obligaciones mercantiles, cuyo plazo es de
cuatro aos.
En el caso de autos, refiere, se encuentra establecido que el 22 de febrero de 2001, el
banco realiz un cargo en la cuenta corriente de su comitente Coexpan Chile S.A, abono
que no fue impugnado o reclamado por el actor, no obstante estar informado con la
cartola enviada el 22 de febrero de 2001, por lo que la accin para determinar
judicialmente el saldo prescribi el 22 de febrero de 2003, y la demanda se present el 18
de mayo de 2004.
Expresa, finalmente que el fallo incurre en una contravencin formal de las normas
descritas, por cuanto prescinde de la aplicacin de las mismas que imponen las
obligaciones respectivas a cada parte del contrato de cuenta corriente bancaria
estableciendo un plazo especial de prescripcin, de dos aos para impugnar cualquier
vicio existente en el manejo de una cuenta corriente.
En el tercer captulo se denuncia la vulneracin del artculo 1545 en relacin al 1564 del
Cdigo Civil. Sobre dicho punto, seala el recurrente que su parte aleg durante el juicio,
que figurando el contrato supuestamente infringido en formulario tipo y que contena solo
clusulas generales, para determinar si se estaba en presencia de incumplimiento deba
interpretarse el contrato segn la aplicacin prctica que las partes hayan hecho del
mismo, de acuerdo con lo establecido en el artculo 1564 inciso 3 del Cdigo Civil. Sin
embargo el fallo en el considerando 23 establece, respecto de tal regla de interpretacin
que su parte "no puede invocarla como causal modificatoria de su responsabilidad
contractual" y es en esa aseveracin donde se produce el error de derecho.
Lo que ocurri es que el contrato de cuenta corriente fue suscrito por el seor Gregorio
Guzmn Cordero en nombre y representacin de Coexpan Chile S.A el 21 de agosto de
1984, en aqul entonces la estructura de poderes de dicha sociedad estableca que para
operaciones bancarias deban actuar el seor Guzmn en conjunto con cualquiera de
otros dos directores, ms en la celebracin del contrato compareci el mencionado seor
185
186
2.- Infraccin al artculo 154 Ley General de Bancos en relacin con los artculos 19 N 3 y
5 inciso 2 de la Constitucin Poltica. La sentencia , dice el recurso, no acept las
declaraciones de los seores Granitti y Oliva por ser empleados del banco en virtud de lo
dispuesto en el artculo 358 N 4 del Cdigo de Procedimiento Civil, el error de derecho
radica en que el juez no repar en que los hechos ventilados en el proceso se
encontraban amparados por el artculo 154 de la citada ley, es decir, la obligacin de
secreto bancario, por lo que es evidente que slo podan declarar por su parte como
testigos, las personas del banco, pues cualquier declaracin de un tercero ajeno al banco
hubiese significado la violacin del secreto bancario arriesgando responsabilidad civil y
penal. Estima que al dejar a su parte desprovista de la declaracin de los testigos infringe
su derecho a defensa consagrado en el artculo 19 N 3 de la Constitucin Poltica de la
Repblica.
Segundo: Que, previo al anlisis de los argumentos del recurso es menester consignar los
siguientes antecedentes del proceso:
a) que don Enrique Vicua Videla, ingeniero, en representacin de la sociedad
demandante demand indemnizacin de perjuicios al Banco Security sealando, en
sntesis, que el 22 de febrero de 2001 el banco demandado extrajo de la cuenta corriente
bancaria de la demandante la suma de $ 170.618.991, la que utiliz el mismo banco en
adquirir US$ 300.000, que en seguida remes a una cuenta del Banco Citibank de Nueva
Cork, sealando como beneficiario de esos fondos a Roberto Eyzaguirre Barahona,
accediendo de este modo a una solicitud hecha por Gregorio Guzmn Cordero el que se
desempeaba como gerente de administracin y finanzas de la compaa, infringiendo de
este modo el contrato de cuenta corriente, puesto que ste ltimo slo poda efectuar
operaciones bancarias, como el giro, rdenes de pago, libramientos u otra forma de
disposicin de cualquier suma mediante documento suscrito por el mencionado Guzmn
Cordero conjuntamente con Roberto Eyzaguirre Barahona o Enrique Videla Vicua o Luis
de Mussy Marchant, tal como se acord en la 34 reunin de directorio de Coexpan Chile
S.A. celebrada el 25 de noviembre de 1999.Estima el perjuicio en la suma equivalente a la
cantidad sustrada, lo que se produjo como consecuencia de la negligencia del
demandado, quien acat una orden de giro de fondos dada nicamente por Gregorio
Guzmn, en circunstancias que estaba vedado actuar de ese modo. b) la parte
demandada se opuso a la accin alegando, en sntesis, que la relacin entre las partes
surgi a partir de un contrato de cuenta corriente bancaria celebrado con fecha 21 de
agosto de 1984, firmado por don Gregorio Guzmn Cordero en representacin de
Coexpan, diariamente, asevera, la demandada interactuaba con el actor, sociedad que
intervena a travs de su gerente de administracin y finanzas, Gregorio Guzmn, por lo
que la intervencin del banco al cumplir las instrucciones que al efecto le impartiera el
mencionado gerente , se adscribi a la ejecucin y cumplimiento que ambas partes
haban concebido desde hace mucho tiempo como vlidas. Refiere que la demandante
vulnera la teora de los actos propios, toda vez que los mismos que validaron la actuacin
de Guzmn, ahora sostienen un incumplimiento contractual inexistente. En subsidio, de lo
anterior alega la exoneracin total de responsabilidad por concurrir negligencia manifiesta
del actor y la improcedencia de la indemnizacin de perjuicios al no haber pedido la
resolucin o el cumplimiento del contrato con indemnizacin de perjuicios, atento lo
dispuesto en el artculo 1489 del Cdigo Civil. Tambin en subsidio, opone la excepcin
de prescripcin del artculo 5 de la Ley sobre Cuentas Corrientes Bancarias y Cheques,
que establece un plazo de dos aos para impugnar y hacer determinar por la va judicial
los saldos de su cuenta corriente y en subsidio, esgrime que ha operado la caducidad del
derecho del actor a reclamar los cargos en su cuenta corriente, conforme al artculo 4 de
187
la citada ley.
Tercero: Que, corresponde en primer trmino, determinar la existencia de la infraccin de
las leyes reguladoras de la prueba que denuncia el recurso, la cual se hace consistir en la
transgresin a los artculos 346 N 3 del Cdigo de Procedimiento Civil y 1.702 del Cdigo
Civil; y artculo 154 de la Ley General de Bancos en relacin con los artculos 19 N 3 y 5
inciso segundo de la Constitucin Poltica, preceptos que de haberse aplicado
correctamente habran llevado a los jueces del grado a interpretar el contrato conforme a
su aplicacin prctica.
Cuarto: Que en primer trmino debe consignarse, como lo ha reconocido reiteradamente
esta Corte, que se entienden vulneradas las normas reguladoras de la prueba,
fundamentalmente, cuando los sentenciadores invierten el onus probandi, rechazan las
pruebas que la ley admite, aceptan las que la ley rechaza, desconocen el valor probatorio
de las que se produjeron en el proceso cuando la ley le asigna uno determinado de
carcter obligatorio o alteran el orden de precedencia que la ley le diere.
Se ha repetido que ellas constituyen normas bsicas de juzgamiento, que contienen
deberes, limitaciones o prohibiciones a que deben sujetarse los sentenciadores. Luego,
los jueces del fondo son soberanos para apreciar las pruebas, dentro del marco
establecido por las normas pertinentes. Se ha repetido que ellas constituyen normas
bsicas de juzgamiento, que contienen deberes, limitaciones o prohibiciones a que deben
sujetarse los sentenciadores. Luego, los jueces del fondo son soberanos para apreciar las
pruebas, dentro del marco establecido por las normas pertinentes.
Por ello la infraccin de ley, en esta materia, slo es posible basarla respecto de normas
que revisten el carcter antes dicho, lo que no alcanza al artculo 346 del Cdigo de
Procedimiento Civil invocado por la recurrente, desde que aquel precepto slo indica
pautas procesales para establecer el reconocimiento de los documentos privados
presentados al juicio, pero su valoracin se encuentra contenida en normas del Cdigo
Civil que no son denunciadas como vulneradas. En efecto, se denuncia como infringido el
artculo 1702 del Cdigo Civil, cuya eficacia como norma reguladora de la prueba est en
relacin directa con lo que precepta el artculo 1700 de este mismo cuerpo legal, el cual
tampoco se seala como vulnerado, de modo que su sola mencin no sirve para
desvirtuar los hechos de la manera como fueron establecidos por los jueces del fondo. No
obstante lo anterior, deber igualmente ser desestimada la denuncia de trasgresin a la
aludida disposicin legal, toda vez que del anlisis del fallo recurrido se colige que los
jueces del fondo en ningn momento negaron el carcter de instrumento privado a las
cartolas bancarias y cheques, debiendo considerarse, adems, que el propsito final de
las argumentaciones que vierte el recurrente a ese respecto para expresar el error de
derecho que atribuye a la sentencia recurrida, consiste en promover que se lleve a cabo
por esta Corte una nueva valoracin de las probanzas, distinta de la ya efectuada por los
jueces del mrito, actividad que resulta extraa a los fines de la casacin en el fondo.
Quinto: Que en lo que hace a la infraccin al artculo 154 de la Ley General de Bancos, al
no haber admitido la declaracin de los testigos del demandado, al haber acogido una
tacha fundada en la calidad de empleados del banco. Cabe puntualizar que dicho
precepto no tiene el carcter de norma de reguladora de la prueba, puesto que se refiere
al secreto bancario y la reserva de ciertas operaciones bancarias. En todo caso, dicho
captulo de impugnacin ser igualmente desestimado, por cuanto se dirige en contra de
aquella parte de la resolucin por la cual se decidi sobre las tachas opuestas,
188
pronunciamientos que no constituye una declaracin del fallo que, en esta parte, tenga el
carcter de sentencia definitiva o interlocutoria que ponga trmino al juicio o haga
imposible su continuacin, motivo por el cual no puede ser revisada por la va de la
casacin que se h a impetrado.
Sexto: Que, establecida la ausencia de infraccin a las normas reguladoras de la prueba,
corresponde consignar los hechos de relevancia jurdica establecidos por los jueces del
grado:
a) en la escritura pblica de 22 de diciembre de 1999, por la cual se redujo la trigsima
cuarta reunin de directorio de Coexpan Chile S.A., consta en la clusula denominada
"Nuevos Poderes nmero I", que se le otorg a don Roberto Eyzaguirre Barahona, las
facultades descritas en la clusula 7 y 8 .
En el nmero III de esa escritura consta que a don Gregorio Guzmn Cordero, se le
confiri poder para que actuando conjuntamente con uno cualquiera de los seores
Roberto Eyzaguirre Barahona o Enrique Videla Vicua o Luis de Mussy Marchant,
representan a la sociedad con las facultades establecidas en los nmeros 7 y 8 del
nmero I de la escritura en comento.
b) la operacin bancaria realizada por el seor Gregorio Guzmn Cordero el 22 de febrero
de 2001, consisti en una orden al banco demandado para la compra de US$ 300.000
para luego solicitar que dicha cantidad de dinero fuera depositada en una cuenta corriente
del banco Citibank Nueva York, cuenta que perteneca a Roberto Eyzaguirre Baraona.
c) en la operacin descrita precedentemente actu solamente el mencionado Gregorio
Guzmn Cordero. d) no se acredit como un hecho el que la actuacin unipersonal de
Gregorio Guzmn Cordero era un modo habitual de operar entre las parte, respecto de
comparar en moneda extranjera para depositar en cuentas de terceros.
Sptimo: Que los hechos consignados precedentemente, llevaron a los jueces del grado a
concluir que la operacin que sirve de fundamento a la presente accin, no se realiz de
acuerdo a lo convenido en la escritura pblica de 22 de diciembre de 1999,
especficamente en la clusula denominada "Nuevos Poderes nmero I", nmeros siete y
ocho en relacin con el nmero III de la escritura pblica de 22 de diciembre de 199, por
lo que el banco incurri en una conducta descuidada o negligente en el cumplimiento de
sus obligaciones contractuales, lo que gener un perjuicio a la demandante.
Los sentenciadores sealan, en lo referido a alegacin del banco demandado, en cuanto
a que la actuacin del seor Guzmn Cordero se ajust al modo habitual de operar entre
las partes, que no se acredit dicha circunstancia y que " an cuando lo hubiere hecho, no
puede invocarla como causal modificatoria de su responsabilidad contractual, desde que
el titular de la cuenta corriente es una persona jurdica que tiene una forma de
representacin distinta y en la cual participan distintas personas en su representacin,
cada una con facultades que le son propias y restringidas a lo que efectivamente se les ha
conferido, siendo de advertir que los poderes para actuar conjuntamente ante el banco
demandado, fueron conferidos por escritura pblica y el hecho que precisamente en las
anteriores operaciones hubiere actuado uno slo de ellos, no implica sino que tambin en
ellas hubo al menos un descuido que no puede obligar al demandante, por no encontrarse
conferidos los poderes para actuar en su representacin de esa forma".
189
Octavo: Que, en el primer captulo del recurso se estima vulnerado el artculo 1489 del
Cdigo Civil, el que deber ser rechazado segn el siguiente anlisis. En efecto, habiendo
quedado establecido como hecho de esta causa que el banco demandado carg en la
cuenta corriente que la Sociedad Comercial e Industrial denominada Coexpan mantena
en ese banco, la suma de $ 170.618.991, para luego adquirir la cantidad de US $
300.000, al cursar una solicitud hecha por quien careca de poder suficiente para
efectuarla, es indudable que incurri en incumplimiento de una obligacin negativa, esto
es de no hacer, puesto que estaba impedido contractualmente de hacerlo sin la
concurrencia de uno cualquiera de los seores Enrique Vicua Videla, Luis de Mussy
Marchant y Roberto Eyzaguirre Barahona, de todo lo cual viene a resultar que los
fundamentos de las infracciones de ley del captulo en estudio, quedan desprovistos de
toda sustentacin fctica y jurdica, puesto que de acuerdo con lo que establece en
artculo 1555 inciso primero del Cdigo Civil el incumplimiento de la obligacin de no
hacer se resuelve en la de indemnizar los perjuicios, si no pudiere deshacerse lo hecho, y
es precisamente lo que ha demandado en estos autos derechamente la sociedad
demandante, ejercitndola como accin substitutiva y compensatoria que resulta ser en
este caso, hasta el punto que el acreedor, como lo manda el inciso final del precepto
anteriormente citado, debe quedar indemne, es decir, libre de dao.
Noveno: Que es til sealar que respecto de la claridad e inteligencia de la norma
contenida en el artculo 1555 inciso primero del Cdigo Civil, que acertadamente aplicaron
los jueces del fondo, no se advierten discrepancias en la doctrina. Los autores Alessandri,
Somarriva y Vodanovic, en el Tratado de las Obligaciones expresan que la obligacin de
no hacer se infringe en los casos que se hace lo que no debi hacerse y que "su
ejecucin forzada slo procede cuando no puede destruirse lo hecho en caso contrario la
contravencin hace responsable al deudor de la indemnizacin de perjuicios"(pgina 247
N 806). Fueyo Laneri, en esa misma direccin manifiesta que la infraccin de la
obligacin de no hacer, cuando no puede deshacerse lo hecho, se resuelve en la de
indemnizar los perjuicios, lo que significa que en vez de la obligacin que no se cumpli
nace otra, la de indemnizar (Tratado sobre Cumplimiento de las Obligaciones, pgina
243). Ren Abeliuk se manifiesta en similar sentido en su Tratado de las Obligaciones
(pgina 666).
Dcimo: Que, a continuacin, es menester consignar que la determinacin de la voluntad
e intencin de los contratantes, esto es la interpretacin de un contrato -en generalconstituye un hecho de la causa, dado que los jueces del fondo lo establecen como fruto
de la valoracin de las probanzas rendidas, y por ende, en cuanto a tal, no es susceptible
de alterarse por la va del recurso de casacin en el fondo y, por el contrario debe
mantenerse inamovible cuando no hay una vulneracin de las normas reguladoras de la
interpretacin de los contratos, debiendo considerarse adems que mientras no se afecte
con ello el verdadero sentido y alcance de los mismas, no es un asunto susceptible de ser
revisado por esta va.
Undcimo: Que, atendido lo precedentemente sealado, no pueden prosperar el tercer y
cuarto captulo del recurso de casacin en el fondo por cuanto, a travs de sus
argumentos se pretende que esta Corte sancione jurdicamente un hecho que no ha sido
establecido por los sentenciadores. En efecto, la recurrente afirma, que de haber
interpretado la relacin jurdica de las partes desde el prisma de la aplicacin prctica,
siguiendo las reglas sobre interpretacin de los contratos, se habra rechazado la
demanda, toda vez que dicha aplicacin prctica resulta concluyente para determinar que
el banco demandado se condujo en todo momento de buena fe en la que la sociedad
190
demandante jams advirti o hizo saber a su parte las actuaciones dolosas de su gerente,
ni impugn las operaciones realizadas por el seor Guzmn.
De esta forma, resulta de toda evidencia que los planteamientos de este captulos del
recurso estn condicionados a que se acepte su manera de entender e interpretar las
estipulaciones contractuales, lo que importa exigir de este tribunal de casacin un nuevo
anlisis sobre la forma de ejecutar el contrato y la prueba rendida sobre el particular para
establecer que la ejecucin practica del mismo, vino a sustituir las clusulas sobre
poderes establecidas en la escritura pblica de veintids de diciembre de 1999, con lo
cual, las rdenes, solicitudes y operaciones realizadas por Gregorio Guzmn Cordero, sin
la concurrencia de la firma de cualquiera de las otras personas autorizadas para ello,
corresponda a la aplicacin prctica que las partes dieron al contrato, lo cual, como se
indic en el considerando precedente, es ajeno al control de esta Corte por lo que estos
captulos del recurso no puede prosperar.
Duodcimo: Que, de este modo, al determinarse por los jueces del fondo los supuestos
fcticos que han sido reproducidos en el considerando sexto, especialmente, haberse
establecido que la operacin bancaria realizada por el seor Gregorio Guzmn Cordero el
22 de febrero de 2001,por la cual sin la concurrencia de algn otro personero del banco
autorizado al efecto, orden al banco demandado la compra de US$ 300.000, para luego
solicitar que dicha cantidad de dinero fuera depositada en una cuenta corriente del Banco
Citibank Nueva York, cuenta que perteneca a Roberto Eyzaguirre Baraona y el hecho de
no haberse acreditado la alegacin de que la actuacin unipersonal de Gregorio Guzmn
Cordero; en este especfico acto jurdico de traspaso de fondos era un modo habitual de
operar entre las partes, se puede advertir que los restantes argumentos del recurso de
casacin en el fondo contraran los hechos tal como fueron establecidos por los
sentenciadores, lo que impone su rechazo.
Dcimo tercero: Que finalmente respecto de la infraccin de los artculos 4 y 5 del D.F.L.
N 707, preceptos que en concepto de esta Corte resultan inaplicables en la especie, toda
vez que nos encontramos frente a una accin que pretende se declare la obligacin de la
demandada de indemnizar perjuicios, como consecuencia de un incumplimiento de una
obligacin contractual, materias que se encuentran regladas por el derecho comn
estatuido en las disposiciones pertinentes contenidas en el Cdigo Civil, siendo por ello
improcedente la aplicacin de normativa especial establecida por el legislador con fines
distintos a los referidos y que dicen relacin con la correccin meramente contable de los
saldos de cuentas corrientes bancarias. En efecto, los artculos 4 y 5 del texto en vigor de
la Ley so bre Cuentas Corrientes Bancarias y Cheques, se refieren a los saldos de tales
cuentas que provienen de los estados peridicos que los bancos envan a los titulares de
las mismas, comnmente denominados "cartolas", las cuales, entre otros movimientos,
indican el nmero de cada cheque girado y su monto, que es cargado o debitado en la
cuenta corriente al ser pagado por el Banco. El cuentacorrentista puede verificar,
entonces, con el talonario de cheques correspondiente, si el respectivo cheque fue o no
cargado en la cuenta corriente por el monto con que fue girado. Si ello est conforme, la
cartola, en cuanto nicamente informa tal hecho, no podra merecer objecin. Asunto muy
diferente es que el Banco, al extraer dinero de la cuenta corriente de la sociedad
demandante para comprar dlares y remesarlos a una cuenta en el extranjero, haya
actuado o no conforme a los poderes otorgados por el cuentacorrentista y debidamente
registrados en el Banco para dar cumplimiento a la respectiva orden de compra, que es lo
que ha ocurrido en la especie.
191
una lectura comparativa de las dos ltimas disposiciones mencionadas con las del Cdigo
Civil Francs, se observa que don Andrs Bello complement la significacin de la forma
verbal en participio "manifestada", agregando el adverbio "claramente", por lo que se
recurrir a la intencin del testador o de las partes en la convencin o contrato cuando ella
se desprende y distingue perfectamente.
De lo contrario, no resulta procedente construir intenciones o voluntades presuntas o
virtuales, sino que se debe recurrir a otros criterios de interpretacin o mejor dicho de
determinacin de la voluntad, con un carcter ms objetivo, sin que se pueda concluir que
simplemente exigi como presupuesto bsico de esta actividad la oscuridad del acto o
convencin, pues es sabido que esta sola precisin lleva envuelta una interpretacin.
De esta manera, la invocacin a la intencin de las partes no resulta suficiente para
legitimar una tal precisin de sentido ya que, como se ha dicho reiteradamente por esta
Corte de Casacin, la distorsin de las disposiciones contractuales ocurre cuando los
sentenciadores, en el ejercicio de la funcin que les es propia, alteran las consecuencias
de clusulas respecto de las que no existe controversia en la forma en que se pactaron,
desnaturalizndolas y, en tales circunstancias, "el poder soberano de los jueces del pleito
para establecer los hechos de la causa, no puede extenderse a su apreciacin jurdica y a
la determinacin de la ley que les sea aplicable; y por consiguiente la ilegal apreciacin de
las clusulas del contrato y las errneas consecuencias que de esta ilegal apreciacin
deduzcan los jueces del pleito deben ser sometidas a la censura de la Corte Suprema por
medio del recurso de casacin por violacin del artculo 1545, o sea por violacin de la ley
del contrato" (Luis Claro Solar, Derecho Civil Chileno y Comparado, pg. 474).
En este sentido debe distinguirse entre lo que es la existencia del contrato y de sus
estipulaciones propiamente tales, que constituye una cuestin de prueba, diferente de la
precisin del sentido y alcance de los actos y contratos, que es un aspecto de
interpretacin, que no deben ser confundidos. En un paso siguiente del anlisis se
encuentra la calificacin que pueda hacerse de la convencin, circunstancia, esta ltima,
que excede la simple interpretacin, que como se ha dicho, est referida a determinar su
sentido y alcance, si n que deba considerarse para ello los efectos que tendr.
La precisin de los elementos de relevancia jurdica es lo que permitir efectuar la
subsuncin de los supuestos de hecho en la norma, est constituida por el producto de la
interpretacin de los hechos, actos, contratos o convenciones, por lo que excede dicha
actividad, al precisar los antecedentes o bases aisladas que tienen relevancia en el
derecho, pero para un correcto anlisis deben ser considerados en su conjunto, no de
manera aislada.
En la calificacin jurdica nos encontramos con la actividad tendiente a aplicar "el derecho
a los hechos, con el fin de determinar su naturaleza jurdica, o sea, la denominacin
atribuida por la ley a una situacin de hecho determinada, especialmente en lo referente a
los actos y contratos, en los cuales ella ha dado reglas que deben ser observadas, toda
vez que no hayan sido derogadas por acuerdo de las partes, en cuyo silencio entra a
suplirlas" (Jos Florencio Infante Daz, Causales de Casacin de Fondo en Materia Civil,
pginas 98 y 99).
Para Capitnt es "la determinacin previa de la naturaleza jurdica de una relacin de
derecho, con el fin de clasificarla en una de las categoras jurdicas existentes".
193
debiendo preferirse el sentido en que pueden producir algn efecto, como tambin tener
presente el riesgo de redaccin del texto de la convencin. En esta labor, se ha dicho, que
el sistema subjetivo de interpretacin de los contratos se atenu al agregarse en el
referido artculo 1560 del Cdigo Civil el adverbio "claramente", por lo que se recurrir a la
intencin de las partes en la convencin o contrato cuando ella se desprenda y distinga
perfectamente, no resultando procedente construir intenciones o voluntades presuntas o
virtuales, sino que se debe recurrir a otros criterios de interpretacin o mejor dicho de
determinacin de la voluntad, con un carcter ms objetivo.
5.- Que en la determinacin de lo que ha sido la voluntad de las partes al acordar una
convencin, es preciso considerar las orientaciones que entrega el legislador,
especialmente en los artculos 1560 a 1566 del Cdigo Civil. De tales normas se puede
observar su intencin de distinguir entre las que se extraen del contrato mismo, de
aquellas que se desprenden de las circunstancias de la especie o que reflejan un
comportamiento de las partes, conforme a lo que estimaron fue el acto o contrato
celebrado.
La doctrina ha tenido la oportunidad de estudiar este punto precisando que "la existencia
de una convencin (cuestin de prueba) y el alcance de una convencin (cuestin de
interpretacin) son dos aspectos diferentes, que no deben confundirse". (Jorge Lpez
Santa Mara, "Sistemas De Interpretacin De Los Contratos", Ediciones Universitarias de
Valparaso, 1971, pgina 66). As, la interpretacin resulta necesaria cuando los trminos
de una convencin suscitan controversia entre las partes respecto de los distintos efectos
que han de tener sus estipulaciones. En esta labor se han clasificado las reglas legales
entre aquellas referidas al contrato propiamente tal y las que reflejan un comportamiento o
acceden al contrato mismo.
De esta forma se puede sealar, siguiendo al profesor Lpez Santa Mara, que existen
reglas de interpretacin intrnsecas al contrato, que en nuestro pas estn constituidas
por: a).- Armona de las clusulas (artculo 1564 del Cdigo Civil); b).- Utilidad de las
clusulas (artculo 1562); y c).- Trminos ambiguos (artculo 1563 inciso primero).
Tambin surgen las reglas extrnsecas: a).- Aplicacin restringida de la declaracin
(artculo 1561); b).- Extensin natural de la declaracin (artculo 1565); c).- Por otros
contratos (artculo 1564 inciso segundo), y d).- Interpretacin autntica (artculo 1564
inciso tercero). Por ltimo se encuentran las reglas supletorias de interpretacin, debiendo
mencionarse: a).- Presuncin de clusulas de uso comn (artculo 1563 inciso final); b).Favor del deudor (artculo 1566 inciso primero); y c).- Riesgo de reduccin (artculo 1566
inciso primero).Enunciado lo que es el principio del respeto al proceder individual y que
obrar contra acto propio no vale, la interpretacin autntica se presenta como una de las
de mayor importancia. Subrayando su capital importancia los autores chilenos, Claro
Solar, por ejemplo, estiman que en un eventual orden de prelacin, ella debera figurar
inmediatamente a continuacin del artculo 1560. "La interpretacin autntica es la reina
de todas las interpretaciones y no hay que creer a aquellos tratadistas que rechazan esa
especie de interpretacin en materia contractual. Tal error nace de la mala aplicacin de
un principio muy verdadero, el cual dice que despus de concluido el contrato, ninguna de
las partes tiene libertad para modificar a su capricho la voluntad ya declarada e
interpretarlo a su guisa. Pero este principio no es, ciertamente, acatado, si las dos partes
se ponen de acuerdo para interpretar su voluntad".En la hermenutica de los contratos, la
inteligencia, el sentido que le dan los contratantes es el faro ms seguro para conocer la
voluntad". Interpretando autnticamente, la Corte Suprema ha dicho: "La regla del inciso 3
del artculo 1564 es de importancia principalmente en la interpretacin de los contratos
195
que contienen obligaciones de dar o hacer, ya que nada puede indicar con ms acierto la
voluntad de las partes en esta materia que la ejecucin llevada a cabo por ellos mismos
de las cosas que, con arreglo a lo pactado, estaban obligadas a dar o hacer". (Jorge
Lpez S anta Mara, op. cit. pgina 96).
6.- Que en la especie la demandada acompa abundante documentacin ( copias de
las cartolas informativas del "estado de cuenta corriente" entre el 3 de enero de 2000 y el
29 de diciembre de 2000 y entre el 02 de enero de 2001 y el 28 de diciembre del mismo
ao; fotocopias por ambos lados de los cheques girados por Guillermo Guzmn Molina en
representacin de Coexpan Chile S.A ., sin la concurrencia de otro socio, entre el 2 de
noviembre de 1999 y el 28 de diciembre de 2001), documentos que indubitablemente
llevan a concluir que hubo una ratificacin tcita y confirmacin del actuar del mencionado
seor Guzmn, por parte del actor, desde que nunca objetaron las actuaciones de dicho
personero.
7.- Que en virtud de lo razonado este disidente estima que los jueces del fondo, al
resolver como lo hicieron, infringieron los artculos 1545 y 1564 del Cdigo Civil, pues se
prescindi de considerar la aplicacin que las partes dieron al contrato durante aos,
incurrindose de este modo en infraccin de ley que influy sustancialmente en lo
dispositivo del fallo.
Regstrese y devulvase, con sus agregados.
Redaccin de la ministra seora Margarita Herreros y del voto en contra su autor. Rol N
7104-07.
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema por los Ministros Sres. Milton Juica
A., Sergio Muoz G., Sra. Margarita Herreros M. y Sres. Juan Araya E. y Guillermo Silva
G.
196
Tribunal
C. Suprema
C. Suprema
disidente)
Considerando
4,7.
(Voto 3,4,5,6 y 8.
especie, desde el momento que ha existido el pago de la obligacin; que este pago lo
efectu quien no es llamado a soportar el gravamen que importa a su patrimonio; que ha
sido til al extinguir la obligacin; que no se encuentra en ninguno de los casos en que se
priva de la accin.
6. Que en consecuencia, al haberse subrogado el ejecutante en los derechos del
acreedor y atendida la naturaleza de la accin incoada ejecutiva cometen error de
derecho los Jueces del grado al aplicar la prescripcin seis meses del artculo 99 de la ley
18.092, puesto que al ocupar el lugar jurdico del acreedor goza del mismo plazo de
prescripcin que el portador del pagar.
8. Que en definitiva, tampoco no puede confundirse la institucin del aval y del fiador,
puesto que cada una de ellas genera obligaciones propias y sujetas a las disposiciones
legales que a ellos especficamente se refiere. En efecto, el aval y la fianza son dos
cauciones personales diferentes especficamente el aval est regulado como garanta
cambiaria y la fianza la prev el derecho comn.
REGLA .
a.- El fiador codeudor solidario de una obligacin cambiaria que la paga, se subroga en
las acciones y derechos del banco acreedor y por ende, al haber ejercido la accin
subrogatoria cambiaria, le son aplicables sus disposiciones que por especiales, priman
sobre aqullas establecidas en el Cdigo Civil (C. 7)
En consecuencia, al encontrarnos ante un caso de accin cambiaria de reembolso,
prevista en el artculo 83 de ley sobre Letra de Cambio y Pagar, dicha accin est sujeta
al plazo de prescripcin establecido en el artculo 99 de la citada ley, que establece un
trmino de seis meses a contar desde el da del pago que se reclama; a diferencia de las
acciones cambiarias directas y de regreso que conforme lo prev el artculo 98 del citado
estatuto jurdico, prescriben en el plazo de un ao a contar desde el da del vencimiento
del documento, por lo que estn en lo cierto los Jueces del fondo cuando aplican la
prescripcin de 6 meses, puesto que la de un ao del artculo 98 est reservada para las
acciones cambiarias directas, cuyo no es el caso.
Voto Disidente Ministro Sergio Muoz.
3. Que en los negocios jurdicos se pueden generar mltiples efectos, sin embargo lo
determinante en la labor de los tribunales en la accin interpuesta, puesto que esa y no
otra la que corresponde resolver, circunstancia que se produce en la especie pues como
lo seala la ejecutada es posible ejercer la accin de reembolso derivada del pago del
pagar, la relativa al pago en general y la derivada del pago del negocio causal del
pagar, como incluso lo sostiene la ejecutada, todo lo cual tiene importancia doctrinaria,
pero en el caso de autos slo cobra relevancia la subrogacin que emana del pago segn
lo invoca el actor, esto es por la regulacin del artculo 1522 del Cdigo Civil, como
tambin la norma del artculo 2378 del mismo Cdigo que se vincula con el fiador y no con
el aval, por lo que no resulta aplicable la normativa del artculo 82 de la ley 18.092.
4. Que, sobre los antecedentes precedentemente reseados, se deben precisar los
efectos de la solidaridad pasiva. Es as que sta, como caucin personal da nacimiento a
una obligacin de parte de quien la contrae, que est dirigida a garantizar el cumplimiento
de otra obligacin en la que se puede o, no tener inters, resultando que respecto de una
199
4. CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 25 marzo 2009. G.J. N 345, p.114. L.P. N 41800.
200
los nmeros 17, 4, 5 y 14 del artculo 464 del Cdigo de Procedimiento Civil, las que
solicitan se acojan con costas. En cuanto a la primera excepcin de prescripcin indican
que de acuerdo a lo expuesto por el ejecutante aproximadamente en junio del 2002 hizo
dos pagos con los cuales la deuda qued liquidada, que esta circunstancia unido a que la
ley indica un plazo de 6 meses para hacer uso de la accin de reembolso sta se
encuentra prescrita sobre la ineptitud del libelo, por no contener una exposicin clara de
los hechos y de fundamentos de derecho asevera que esta situacin se produce al no
haber mencionado el ejecutante la razn de deber esa cantidad y tambin por omitir el da
preciso de junio que efectu el pago; en lo relativo al beneficio de excusin, manifiesta
que en su condicin de codeudores debieron primero dirigir en forma previa la accin
contra el deudor principal, la Sociedad Educacional Inmobiliaria e Inversiones Arken
Limitada y despus para que el caso que sta no pagara hacer efectiva la responsabilidad
de cada uno de ellos; la nulidad de la obligacin la hacen consistir en que el ejecutante
junto con su cnyuge son objeto de una investigacin criminal por apropiacin indebida de
dinero que se investiga por el desvo de dineros del establecimiento a sus cuentas
personales situacin que los llev al incumplimiento de las obligaciones que contrajo la
sociedad, lo que los hace pensar que el pago de las deudas se efectu con el producto
del presunto delito, razn por la cual estiman nula la obligacin.
Tercero: Que a fojas 85 al evacuar los traslados la ejecutante, pide que las excepciones
sean rechazadas con costas. En cuanto a la primera excepcin seala que la accin no
se encuentra prescrita puesto que los plazos de prescripcin no han transcurrido al tener
aplicacin en esta caso, las normas de prescripcin del artculo 2515 del Cdigo Civil; la
segunda, por ser la demanda totalmente inteligible, al estar debidamente explicados los
hechos como el derecho en que se funda; la tercera, por haber operado la subrogacin,
no corresponde invocar tal beneficio, expresa que lo que ocurre es que la sociedad no
existe y no funciona hace ms de un ao; respecto de la cuarta excepcin seala, que los
hechos que a juicio de los ejecutados motivan la nulidad no son tales y no determinan que
la obligacin sea nula.
Cuarto: Que del mrito de las alegaciones de las partes, se puede concluir que acerca de
los siguientes hechos no existe controversia:
a. Que don Gabriel Ernesto Morales Avendao, dona Felicita del Pilar Videla Smith, don
Carlos Andrs Colarte Salazar y doa Bernardita Carolina Contreras Mejas se obligaron
como avalistas, fiadores y codeudores solidarios en el pagar a plazo N 090113023006
por un monto de $ 8.000.00 y que don Gabriel Ernesto Morales Avendao y doa
Bernardita Carolina Contreras Mejas se obligaron como avalistas, fiadores y codeudores
solidarios en el contrato de lnea de crdito de negocios y empresas, contrato de cuenta
corriente ordinaria N 13081802 y contrato de cuenta corriente de crdito N 20
13081820, por un total de $ 3.000.000.
b. Que don Gabriel Ernesto Morales Avendao pag al acreedor de tales crditos, Banco
Santiago, la deuda proveniente de los documentos. referidos.
c. Que en virtud del referido pago, el citado seor Morales Avendao se subrog
legalmente en los derechos que tena el acreedor, esto es el Banco Santiago, para el
cobro de la deuda.
Quinto: Que por el contrario del mrito de las alegaciones de las partes se puede concluir
que existe controversia acerca del origen del dinero con que se realiz el pago por el
202
203
5. Que por haberse pagado el crdito el da 3 de junio de 2002 segn consta a fs. 1, ha
de hacerse lugar a la excepcin de prescripcin de esta clase de accin cambiaria por
haber transcurrido desde esa fecha a la de notificacin, 31 de marzo y cinco de abril
segn consta a fs. 10 y 11, el plazo de seis meses que a estos efectos previene el artculo
99 de la ley N 18.092.
En efecto, no pueden sostenerse dudas en cuanto a la extensin del trmino de
prescripcin ni a la oportunidad desde la que debe ser contado, porque esta accin de
reembolso se ha regulado de manera particular a partir de la calidad de aval, por lo que
no es posible razonar a estos efectos con las condiciones de fiador y codeudor solidario y
las reglas generales del Cdigo Civil.
6. Que as las cosas debe ser revocada la sentencia en cuanto desestim la excepcin
de prescripcin y, en consecuencia, omitirse pronunciamiento acerca de los restantes
motivos de oposicin a la ejecucin.
Por estas consideraciones, de acuerdo tambin con lo previsto en los artculos 82 y 99 de
la ley N 18.092, 186, 187, 189, 191, 223, 764, 765, 767, 768 causal 5, 781 del Cdigo de
Procedimiento Civil se decide:
1. Rechazar la objecin de documentos de fs. 158;
2. Rechazar el recurso de casacin en la forma interpuesto por los ejecutados Carolina
Contreras Mejas y Carlos Colarte Salazar en contra de la sentencia de diecisis de
septiembre del ao dos mil tres escrita a fs. 126, la que no es nula.
3. Revocar la referida sentencia en cuanto desestima la excepcin de prescripcin de la
accin, declarndose que, en cambio, sta queda acogida, rechazndose la ejecucin,
con costas.
4. En consecuencia, se omite pronunciamiento respecto de las restantes excepciones.
Redaccin del Ministro seor Brito.
Regstrese y devulvanse.
Dictada por los Ministros seores Haroldo Brito Cruz, Carlos Gajardo Galdames, y el
Abogado Integrante seor Nelson Pozo Silva. No firma el Ministro seor Gajardo, no
obstante haber concurrido a la vista y acuerdo del fallo, por encontrarse ausente.
Rol N 9.6402003.
Bernardita y Colarte Salazar Carlos , don Gabriel Morales Avendao deduce demanda
ejecutiva en contra de doa Bernardita Carolina Contreras Mejas y de don Carlos Colarte
Salazar, a fin se despache mandamiento de ejecucin y embargo en contra de ambos, por
la suma de $ 3.805.767 y de $ 1.667.591, respectivamente ms intereses y costas.
Sostiene que con fecha 23 de noviembre de 2000, la Sociedad Educacional Arken
Limitada tom un prstamo con el Banco Santiago por la suma de $ 8.000.000, mediante
operacin N 0.901.13.0230066, afianzado y avalado por doa Felicita Videla Smith,
doa Bernardita Contreras Mejas, don Carlos Colarte Salazar y por el ejecutante, en
partes iguales, constituyndose adems, en codeudores solidarios, lo que acredita con un
pagar que acompaa.
Explica que en junio de 2002, encontrndose la sociedad antes indicada en mora con el
Banco Santiago, pag en su calidad de aval, fiador y codeudor solidario ntegramente la
obligacin antes indicada, fecha en la cual an se adeudaba al banco la suma de $
6.670.364, por concepto de capital e inters.
Aade que en el mes de noviembre de 2000, la Sociedad Educacional Arken Limitada, de
la cual todos son socios, contrat con el mismo banco cuenta corriente y tom lnea de
crdito por la suma de $ 3.000.000, en garanta de dicha obligacin, doa Bernardita
Contreras Mejas y el ejecutante se constituyeron en codeudores y fiadores solidarios.
Seala que en junio de 2002, frente a la situacin de insolvencia de la deudora, principal y
encontrndose la referida sociedad en mora, el ejecutante pag un prstamo por lnea de
crdito que alcanzaba la suma de $ 4.276.352.
Agrega que estas deudas las pag en su calidad de aval fiador y codeudor solidario, por
lo que ha operado la subrogacin de derechos de conformidad a lo dispuesto en los
artculos 1522 y 2378 del Cdigo Civil.
En cuanto al derecho cita los artculos 434 N 4 del Cdigo de Procedimiento Civil y
artculos 1522 y 2378 del Cdigo Civil.
A fojas 70 y 76, los ejecutados se opusieron a la ejecucin deduciendo las excepciones
de los numerales 17, 4, 5 y 14 del artculo 464 del Cdigo de Procedimiento Civil. Interesa
para los efectos del presente recurso, la excepcin de prescripcin que se sustenta en
que el demandante realiz el pago tanto del prstamo que se garantiz con el pagar
como de la lnea de crdito y cuenta corriente, en el mes de junio de 2002 y que teniendo
en consideracin lo prescrito en el artculo 99 de la ley 18.092, sobre letra de cambio y
pagar en relacin con el artculo 82 del mismo estatuto jurdico, las acciones de
reembolso que la contraria solicita prescriben en el plazo de seis meses contados desde
el da del pago cuyo reembolso se reclama.
Aade que entre el mes de junio de 2002 hasta el emplazamiento legal, 1 y 7 de abril de
2003, han transcurrido 10 meses, por lo que la accin se encuentra prescrita.
Por sentencia de diecisis de septiembre de dos mil tres, escrita a fojas 146, la jueza
titular del referido Tribunal rechaz las excepciones y orden seguir adelante con la
ejecucin hasta hacer ntegro y cumplido pago de lo adeudado al acreedor en capital,
intereses y costas.
206
207
Se contraviene el inciso segundo del artculo 2514 del Cdigo Civil, pues la prescripcin
se cuenta desde que se hizo efectiva la clusula de aceleracin y en este caso desde que
el ejecutante pag.
Segundo: Que previo al anlisis de los argumentos del recurso es menester consignar los
siguientes hechos de relevancia jurdica:
a) Que don Gabriel Ernesto Morales Avendao, doa Felicita del Pilar Videla Smith, don
Carlos Andrs Colarte Salazar y doa Bernardita Carolina Contreras Mejas se obligaron
como avalistas, fiadores y codeudores solidarios en el pagar a plazo N 090113023006
por un monto de $ 8.000.000 y que don Gabriel Ernesto Morales Avendao y doa
Bernardita Carolina Contreras Mejas se obligaron como fiadores y codeudores solidarios
en el contrato de lnea de crditos de negocios y empresas, contrato de cuenta corriente
ordinaria N 1308102 y contrato de cuenta corriente de crdito N 201381820, por un
total de $ 3.000.000.
b) Que don Gabriel Morales Avendao pag al acreedor de tales crditos, Banco
Santiago, la deuda proveniente de los documentos referidos el tres de junio de 2002.
c) Que en virtud, del referido pago, el citado Morales Avendao se subrog legalmente en
los derechos que tena el acreedor, esto es, el Banco Santiago, para el cobro de la deuda.
Tercero: Que el fallo censurado para acoger, la excepcin de prescripcin y desestimar la
demanda ejecutiva ha afirmado que: En concepto de la actora, con el hecho del pago se
produjo la subrogacin legal y surgi para los restantes avales la obligacin de pagar
proporcionalmente al primero, por lo que es inequvoco que la accin de que se trata es la
de reembolso que previene el artculo 82 de la ley N 18.092, la que es de carcter
cambiario.
Que por haberse pagado el crdito el da 3 de junio de 2002 segn consta a fs. 1, ha de
hacerse lugar a la excepcin de prescripcin de esta clase de accin cambiaria por haber
transcurrido desde esa fecha a la de notificacin, 31 de marzo 5 de abril segn consta a
fs. 10 y 11, el plazo de seis meses que a estos efectos previene el artculo 99 de la ley N
18.092.
En efecto, no pueden sostenerse dudas en cuanto a la extensin del trmino de
prescripcin ni a la oportunidad desde la que debe ser contado, porque esta accin de
reembolso se ha regulado de manera particular a partir de la calidad de aval, por lo que
no es posible razonar a estos efectos con las condiciones de fiador y codeudor solidario y
las reglas generales del Cdigo Civil.
Cuarto: Que del tenor del libelo de casacin aparece que la controversia, gira en torno a
su respecto del pagar, al subrogarse el ejecutante en los derechos del acreedor, se
aplica la accin de reembolso del artculo 82 de la ley 18.092 o la accin subrogatoria del
artculo 1522 del Cdigo Civil, de lo cual derivar que se aplique la prescripcin de 6
meses, regulada expresamente en el artculo 99 de la ley 18.092, o de un ao establecido
en el artculo 98 del mismo estatuto jurdico.
En seguida, tambin la recurrente objeta el hecho de que se haya aplicado, por los jueces
del grado el artculo 99 de la ley 18.092, a la operacin de crdito de dinero que se origin
208
caso de pago parcial, en el cual puede exigir que se deje testimonio de lo pagado en la
letra y que, tambin, se le otorgue copia ntegra del documento, certificada por notario, la
cual tendr el mismo valor que el documento original, para el ejercicio de la accin de
regreso de reembolso.
La ley 18.092, no entrega normas sobre procedimiento para el ejercicio de las acciones
cambiarias, las cuales, por lo tanto quedan regidas por las reglas de procedimiento
general y de acuerdo a ella proceder la va ejecutiva u ordinaria.
Sptimo: Que en este contexto, debe tenerse presente que el ejecutante, Gabriel Morales
Avendao, tiene la doble calidad de portador o tenedor de la letra y avalista que pag el
pagar cuyo cobro se persigue y; los ejecutados Contreras y Colarte, las de avalista del
aceptante.
El ejecutante se ha subrogado en las acciones y derechos del banco y por ende al haber
ejercido la accin subrogatoria cambiaria, le son aplicables sus disposiciones que por
especiales, priman sobre aquellas establecidas en el Cdigo Civil.
Octavo: Que, en consecuencia, al encontrarnos ante un caso de accin cambiaria de
reembolso, prevista en el artculo 83 de ley sobre Letra de Cambio y Pagar, dicha accin
est sujeta al plazo de prescripcin establecido en el artculo 99 de la citada ley, que
establece un trmino de seis meses a contar desde el da del pago que se reclama; a
diferencia de las acciones cambiarias directas y de regreso que conforme lo prev el
artculo 98 del citado estatuto jurdico, prescriben en el plazo de un ao a contar desde el
da del vencimiento del documento, por lo que estn en lo cierto los Jueces del fondo
cuando aplican la prescripcin de 6 meses, puesto que la de un ao del artculo 98 est
reservada para las acciones cambiarias directas, cuyo no es el caso.
Noveno: Que en relacin al captulo de impugnacin referido al yerro que cometen los
Jueces del grado, al aplicar la prescripcin de seis meses a la deuda emanada del
contrato de cuenta corriente de crdito, por no tratarse de un pagar. Es lo cierto, que el
ttulo acompaado a la ejecucin, en lo que hace a dicho crdito, no constituye ninguno
de aquellos a que se refiere el artculo 434 del Cdigo de Procedimiento1 Civil, por lo que
no slo no es aplicable el artculo 99 de la ley 18.092, sino que, en cumplimiento a la regla
del artculo 441 del Cdigo de Procedimiento Civil, los Jueces del mrito nunca debieron
dar curso a la demanda ejecutiva a su respecto.
Dcimo: Que sin perjuicio de lo expuesto precedentemente, de acuerdo con lo prescrito
en el artculo 767 del Cdigo de Procedimiento Civil, para que se justifique la anulacin de
una sentencia en virtud de un recurso de la naturaleza del que ahora se analiza, es
necesario que el error de derecho en que incurra la sentencia impugnada influya del modo
sustancial en lo dispositivo de la misma, de forma tal que pueda afirmarse que, de no
haberse incurrido en l, la decisin habra sido distinta de aquella a que se arrib.
En consecuencia el tribunal de casacin, de comprobar la existencia de una infraccin de
ley, debe establecer, antes de anular la sentencia, si al dictar fallo de reemplazo
efectivamente concluira de modo distinto al que lo hicieron los jueces de la instancia.
Decimoprimero: Que teniendo presente lo anterior, en el caso de autos, aun cuando los
sentenciadores efectivamente podran haber incurrido en error de derecho al establecer
que se encontraba prescrita la accin ejecutiva respecto del contrato de cuenta corriente,
210
la solucin del litigio habra sido de todas formas rechazar la demanda por no tratarse de
un ttulo que lleve aparejada ejecucin.
Decimosegundo: Que por las razones expresadas procede el rechazo del recurso
interpuesto.
Por estas consideraciones y lo dispuesto en los artculos 764 y 767 del Cdigo de
Procedimiento Civil, se rechaz el recurso de casacin en el fondo interpuesto en el
primer otros de fojas 201, por la abogada Tamara Escobar Geywitz, en representacin
del ejecutante, en contra de la sentencia de diez de septiembre de dos mil siete escrita a
fojas 196.
Acordada con el voto en contra del Ministro seor Muoz Gajardo, quien estuvo por
acoger el recurso de casacin en el fondo, anular la sentencia de segundo grado y dictar
fallo de reemplazo, separadamente a continuacin, pero sin previa vista de la causa, por
la que se confirma la sentencia de primera instancia, en cuanto rechaza la excepcin de
prescripcin respecto del pagar, por las siguientes argumentaciones:
1. Que segn se dej establecido por los jueces del mrito, en la demanda ejecutiva se
puede leer que se demanda a Bernardita Contreras Mejas por la suma de $ 3.805.767 y a
Carlos Colarte Salazar por la suma de $ 1.667.591, por cuanto junto al actor, Gabriel
Morales Avendao, son socios de la Sociedad Educacional Arken Limitada, la cual el 23
de noviembre de 2000 tom un prstamo del Banco de Santiago por la suma de $
8.000.000, mediante operacin N 0.901.13.023006, que fue afianzada, avalada y se
constituyeron en codeudores solidarios Felicita Videla Smith, Bernardita Contreras Mejas,
Carlos Colarte Salazar y Gabriel Morales Avendao. En noviembre de 2000 la Sociedad
Educacional Arken Limitada, celebr un contrat de cuenta corriente con el Banco
Santiago y tom lnea de crdito por la suma de $ 3.000.000, constituyndose como fiador
y codeudor solidario Bernardita Contreras Mejas y el actor Gabriel Morales Avendao.
Por la situacin de insolvencia y morosidad de la sociedad el demandante pag el saldo
de la deuda por las sumas que indica, el cual cobra a los demandados, sustentando su
pretensin en la subrogacin producida en su favor de los derechos del acreedor,
invocando los artculos 1522 y 2378 del Cdigo Civil.
2. Que las demandadas, en el libelo de oposicin en que dedujeron las excepciones,
expresaron: En consecuencia, y de acuerdo con lo sealado por el propio demandante,
estamos frente a un pretendido caso de subrogacin legal, dado que se tratara de un
supuesto cumplimiento de una obligacin social vencida y pagada por uno de los socios y
que ahora repite en contra de los dems socios a prorrata de sus derechos sociales . Sin
embargo, al sustentar la excepcin de prescripcin la hace recaer no en la subrogacin
general descrita, sino que en la relativa al aval en torno a un pagar, bajo los trminos del
artculo 82 de la ley 18.092, en circunstancias que, como se ha dejado expresado slo en
lo referente a la primera de las deudas solucionadas fue constituida la mencionada
garanta.
3. Que en los negocios jurdicos se pueden generar mltiples efectos, sin embargo lo
determinante en la labor de los tribunales en la accin interpuesta, puesto que esa y no
otra la que corresponde resolver, circunstancia que se produce en la especie pues como
lo seala la ejecutada es posible ejercer la accin de reembolso derivada del pago del
pagar, la relativa al pago en general y la derivada del pago del negocio causal del
pagar, como incluso lo sostiene la ejecutada, todo lo cual tiene importancia doctrinaria,
211
pero en el caso de autos slo cobra relevancia la subrogacin que emana del pago segn
lo invoca el actor, esto es por la regulacin del artculo 1522 del Cdigo Civil, como
tambin la norma del artculo 2378 del mismo Cdigo que se vincula con el fiador y no con
el aval, por lo que no resulta aplicable la normativa del artculo 82 de la ley 18.092.
4. Que, sobre los antecedentes precedentemente reseados, se deben precisar los
efectos de la solidaridad pasiva. Es as que sta, como caucin personal da nacimiento a
una obligacin de parte de quien la contrae, que est dirigida a garantizar el cumplimiento
de otra obligacin en la que se puede o, no tener inters, resultando que respecto de una
misma obligacin existirn varios obligados.
Encontrndose pendiente el pago de la obligacin, el codeudor solidario no interesado,
carece de cualquier accin personal para exigir prestacin alguna al deudor interesado, ya
que su garanta no se ha hecho efectiva, de modo que est sujeta a una triple condicin:
En primer trmino, que no se pague el crdito por el deudor interesado o una proporcin
del mismo; en segundo lugar, que se le requiera el pago de la deuda y, por ltimo, que
solucione, a lo menos en parte, la obligacin caucionada.
Producidos estos eventos, el deudor no interesado que pag, tendr derecho a repetir por
el total de lo pagado y slo en contra de los deudores interesados, esto en atencin a que
el artculo 1522 del Cdigo Civil, en su inciso segundo lo considera fiador y, precisamente
cuando paga, y no antes adems la ley lo subroga en los derechos del acreedor.
Es as que el pago es el hecho que da origen a la accin personal de reembolso del
artculo 2370 del Cdigo Civil, como adems, a la accin subrogatoria legal prevista en el
artculo 1610 N 3 del mismo Cdigo; acciones que derivan de su doble calidad de
codeudor solidario no interesado y por haber efectuado el pago, ya que en este evento ha
pagado una deuda ajena y la ley le considera fiador, no antes. Nace aqu la relacin entre
los codeudores de contribucin a la deuda.
5. Que al examinar los requisitos de la accin subrogatoria ellos concurren en la
especie, desde el momento que ha existido el pago de la obligacin; que este pago lo
efectu quien no es llamado a soportar el gravamen que importa a su patrimonio; que ha
sido til al extinguir la obligadocin; que no se encuentra en ninguno de los casos en que
se priva de la accin.
6. Que en consecuencia, al haberse subrogado el ejecutante en los derechos del
acreedor y atendida la naturaleza de la accin incoada ejecutiva cometen error de
derecho los Jueces del grado al aplicar la prescripcin seis meses del artculo 99 de la ley
18.092, puesto que al ocupar el lugar jurdico del acreedor goza del mismo plazo de
prescripcin que el portador del pagar.
7. Que resulta ms evidente el error de derecho desde que se aplica una normativa que
regula la prescripcin especial referida a los avales para absolver de la ejecucin al
demandado, la cual no concurre en torno a una de las obligaciones que funda la
ejecucin, toda vez que no procede efectuar a estas alturas del proceso la revisin de
oficio de los supuestos de la ejecucin, pues su constatacin debe realizarse al proveer la
demanda segn lo ordena el artculo 441 del Cdigo de Procedimiento Civil.
8. Que en definitiva, tampoco no puede confundirse la institucin del aval y del fiador,
puesto que cada una de ellas genera obligaciones propias y sujetas a las disposiciones
212
legales que a ellos especficamente se refiere. En efecto, el aval y la fianza son dos
cauciones personales diferentes especficamente el aval est regulado como garanta
cambiaria y la fianza la prev el derecho comn.
Para justificar esta diferencia se ha sealado por la doctrina lo siguiente:
El aval, garanta cambiaria.
1. El aval slo puede garantizar obligaciones cambiarias, cual es el fin propio de esta
caucin como acto jurdico y as fluye del artculo 46 de la ley 18.092, cuando al final del
inciso primero resalta este carcter, al decir: Por el cual un girador, un endosante o un
tercero garantiza, en todo o en parte, el pago de ella , esto es, de la letra de cambio . La
fianza puede garantizar toda clase de obligaciones, sea de dar, hacer o no hacer aunque
la que contrae el fiador debe ser de dar una cantidad de dinero (artculo 2343 del Cdigo
Civil).
2. El aval es un acto jurdico unilateral, la fianza un contrato.
3. El aval es un acto formal, (escrito y firmado), puesto que as lo establece el artculo
46, la fianza es consensual por regla general puesto que el artculo 2335 del Cdigo Civil
no previene para su perfeccionamiento la observancia de ninguna formalidad, salvo la
fianza mercantil que segn el artculo 820 del Cdigo de Comercio: Deber otorgarse por
escritura pblica y sin esta circunstancia ser de ningn valor y efecto .
4..El aval es siempre comercial, porque el artculo 3, N 10 del Cdigo de Comercio, le
da este carcter a las operaciones que versen sobre letras de cambio y pagars, entre las
cuales se encuentran, el aval. La fianza adquiere la naturaleza del acto al cual accede
(artculo 2335 y 1442 del Cdigo Civil).
5. El avalista se constituye en responsable del todo o parte del pago de la letra de
cambio y el portador legtimo podr exigirle su cobro total o parcialmente en forma directa.
Concebido el aval sin limitaciones, seala el artculo 47, la responsabilidad del avalista se
mide en funcin de la que tiene el aceptarle de una letra de cambio, que es el principal
obligado.
La fianza le otorga al fiador el beneficio de excusin y el de divisin, de acuerdo a lo
sealado en los artculos 2357 y 2367 del Cdigo Civil, a menos que no goce de estos
derechos o se haya obligado solidariamente (artculos 2358 y 1514 del Cdigo Civil).
6. La nulidad de la obligacin avalada no afecta al aval (artculo 7 en relacin con el
artculo 46 de la ley 18.092), sin embargo cualquier vicio que afecte la obligacin
afianzada, afecta a la fianza.
7. El avalista no puede oponer al portador legtimo excepciones personales del avalado;
porque su obligacin es independiente y el derecho del beneficiario es autnomo, en tanto
el fiador puede oponerla a su acreedor la excepcin de dolo, violencia o cosa juzgada que
incida en la obligacin afianzada pero no las personales del deudor. Con todo, el fiador
puede oponer las excepciones que no sean inherentes al deudor y que emanen de la
naturaleza de la obligacin principal. (Artculo 2354 del Cdigo Civil).
213
214
Tribunal
C. Santiago
Considerando
6 y 7.
REGLA .
a.- Un contrato de leasing busca la prestacin de un servicio financiero para que el
arrendatario pueda financiar la adquisicin de bienes, y en este sentido es anlogo a las
obligaciones en dinero, lo que quiere decir que la corte debe atenerse a la normativa que
las rige.
b.- La indemnizacin de perjuicios de carcter compensatorio no procede en las
obligaciones de dinero. La suma de dinero que corresponde al cumplimiento ntegro de la
obligacin es la indemnizacin de perjuicios compensatorios. Solo es pertinente la
215
122
216
218
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Autonoma de la Voluntad
C. Santiago
4.
Objeto ilcito.
C. Santiago
6.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
4. Que el principio de la autonoma de la voluntad o simplemente libertad contractual,
est consagrada en el mbito del Derecho Privado, y consecuencialmente, permite pactar
o convenir todo aquello que no contravenga la ley y que, obviamente, no vulnere las
garantas constitucionalmente consagradas; en este caso, la libertad de trabajo , cuyo
correlato est sealado en el N 21 del artculo 19 de la Constitucin Poltica de la
Repblica, que establece el derecho a desarrollar cualquier actividad econmica que no
sea contraria a la moral, al orden pblico o a la seguridad nacional, respetando las
normas legales que la regulen;
219
5. Que, sobre esta materia, resulta de inters traer a colacin lo que seala don Enrique
Evans de la Cuadra, en su libro Los Derechos Constitucionales , en cuanto expresa "que
la libertad de trabajo consiste en el derecho constitucional que habilita a toda persona a
buscar, obtener, practicar, ejercer o desempear cualquier actividad remunerativa,
profesin u oficio lcitos, vale decir, no prohibidos por la ley . Estas normas de rango
constitucional consagran efectivamente el Orden Pblico Econmico;
REGLA .
a.- El principio de autonoma de la voluntad o simplemente libertad contractual, est
consagrada en el mbito del derecho privado, y consecuencialmente permite pactar todo
aquello que no contravenga la ley y que, obviamente, no vulnere las garantas
constitucionalmente consagradas; en este caso, la libertad de trabajo , cuyo correlato
est sealado en el N 21 del artculo 19 de la Constitucin Poltica de la Repblica.
b.- Una clusula que importa obligarse a no desarrollar un determinado negocio a
perpetuidad, vulnera un derecho constitucionalmente consagrado, adoleciendo tal
clusula de objeto ilcito; entendiendo por tal aqul que es contrario a la ley, a las buenas
costumbres y al orden pblico; tesis doctrinaria que ha sido histricamente la ms
aceptada. En razn de ello la clusula es nula absolutamente.
4. CITA DE FUENTE.
C. Santiago, 06 abril 2009. G.J. N 346, p. 140. L.P. N 41972123
123
220
Corte Santiago
Fallo:
Vistos:
Se reproduce la sentencia en alzada de dos de agosto de dos mil cuatro, escrita a fojas
479 y siguientes, con excepcin de sus fundamentos vigsimo, vigsimo tercero, vigsimo
cuarto, vigsimo quinto, vigsimo sexto, vigsimo sptimo, vigsimo octavo, vigsimo
noveno, trigsimo y trigsimo segundo; la parte final del fundamento dcimo noveno
desde donde dice por lo que incurri en incumplimiento de la obligacin contenida en el
N 3 y hasta su trmino, que se eliminan;
1. Que del examen de los autos Rol 11.1002004, del Tercer Juzgado Civil de Santiago,
aparecen los antecedentes que a continuacin se sealan y que revisten especial
importancia para la decisin que se adopte en esta instancia.
2. Que la sentencia de primer grado acoge la demanda de lo principal de fojas 15, slo
221
5. Que, sobre esta materia, resulta de inters traer a colacin lo que seala don Enrique
Evans de la Cuadra, en su libro Los Derechos Constitucionales , en cuanto expresa "que
la libertad de trabajo consiste en el derecho constitucional que habilita a toda persona a
buscar, obtener, practicar, ejercer o desempear cualquier actividad remunerativa,
profesin u oficio lcitos, vale decir, no prohibidos por la ley . Estas normas de rango
222
Por estas consideraciones y lo dispuesto en las normas citadas y artculo 186 y siguientes
del Cdigo de Procedimiento Civil, se revoca la sentencia apelada de dos de agosto de
dos mil cuatro, escrita a fojas 479 y siguientes, en cuanto acoge la demanda principal y
rechaza la reconvencional, y se declara que se rechaza dicha demanda principal y se
acoge la reconvencional del primer otros de fojas 29, declarndose la nulidad absoluta de
la clusula tercera del convenio de fojas 3 de autos, sin costas, por haber tenido el actor y
demandado reconvencional motivo plausible para litigar. Se la confirma, en lo dems.
Regstrese y devulvase.
223
Pronunciada por la Sexta Sala de esta Iltma. Corte de Apelaciones, integrada por los
ministros seores Jorge Dahm Oyarzn, doa Gloria Ana Chevesich Ruiz y abogado
integrante seor Pedro Esquivel Santander.
Rol N 11.1002004
224
Tribunal
C. Suprema
Considerando
5.y 6.
225
Quinto: Que del examen del contrato aludido, en particular de la clusula contenida en la
estipulacin undcima del mismo, transcrita en el fundamento tercero que precede,
aparece que las partes convinieron lo que se ha denominado "clusula de aceleracin" y
consiste en hacer exigible el total de una deuda como si estuviera vencida, no obstante
existir plazos pendientes, por el no pago, retardo o mora en el pago de una o ms de las
cuotas en que se encuentre dividido el servicio de la obligacin. Esta modalidad de
anticipar el vencimiento de la obligacin fija el tiempo inicial desde el cual debe contarse
el plazo de prescripcin.
Sexto: Que el sentido de la clusula de aceleracin es hacer exigible una obligacin que
se paga en cuotas, por el solo hecho de la mora de una de ellas, como si todo el crdito
fuere exigible, aunque no se haya producido la mora de las restantes parcialidades, y ste
es el derecho que le asiste al acreedor, el de poder cobrar un total o un saldo insoluto de
una obligacin, en el solo evento de la mora de una de las cuotas en que se dividi el
crdito, cualquiera sea el sentido - facultativo o imperativo - en que se haya redactado la
clusula en discusin.
VOTO DISIDENTE
1.-Que en la redaccin de las clusulas de aceleracin es posible determinar la
reglamentacin dedos aspectos perfectamente diferenciados, esto es, el evento y
condiciones en que se hace exigible la obligacin, como adems, el derecho que se
concede al acreedor para cobrar dicha obligacin.
En relacin con el primer aspecto corresponde tener presente los trminos y condiciones
en que se acuerda la clusula, puesto que sta puede ser redactada en trminos
facultativos o imperativos, quedando radicada en la voluntad del acreedor o fijado el
evento previamente por las partes, redaccin sta ltima, que deja entregada a la sola
ocurrencia del evento estipulado para acelerar el total de la deuda.
En lo referido a la reglamentacin del derecho a ejercer la clusula de aceleracin
derivada del no pago de la obligacin, sta pasa a reiterar aquello que permite el
aceleramiento jurdico, sin que tenga una especial relevancia, puesto que, en todo caso,
le asistir la posibilidad de cobrar judicialmente el crdito por todo el plazo fijado por el
legislador antes que opere la prescripcin.
REGLA .
a.- El sentido de la clusula de aceleracin es hacer exigible el total de una obligacin
pactada en cuotas, por el solo hecho de la mora de una de ellas, como si todo el crdito
fuere exigible aunque no se haya producido la mora de las restantes parcialidades, y ste
es el derecho que le asiste al acreedor, el de poder cobrar un total o un saldo insoluto de
una obligacin, en el solo evento de la mora de una de las cuotas en que se dividi el
crdito, cualquiera sea el sentido - facultativo o imperativo - en que se haya redactado la
clusula
b.- Es a partir de la fecha del incumplimiento que se hizo exigible el total de la deuda,
oportunidad desde la cual se cuenta el trmino de inactividad que requiere la prescripcin
extintiva.
Voto Disidente
226
2514 y 2515 del Cdigo Civil, segn se pasa a explicar: Se sostiene en el recurso que
este juicio se tramita conforme al procedimiento establecido en los artculos 103 y
siguientes de la Ley General de Bancos, que tuvo su origen en el juicio estatuido en la Ley
de la Caja de Crdito Hipotecario creada por la ley de 29/8/1855, que se ha mantenido
prcticamente inalterable hasta la fecha, siendo recogido dicho procedimiento por la
mencionada Ley General de Bancos.
Estima el recurrente que de la historia del procedimiento contemplado en la citada ley,
queda de manifiesto que ste es independiente y distinto del establecido en el Libro III del
Cdigo de Procedimiento Civil y que la principal diferencia que existe entre ambos
procedimientos es que para dar curso a un juicio ejecutivo de obligacin de dar es
indispensable que el acreedor haga valer un ttulo ejecutivo de aquellos sealados en el
artculo 434 del Cdigo de Procedimiento Civil y concordante con ello el artculo 464 N 17
del mismo estatuto jurdico dispone que el deudor puede oponer a la ejecucin la
excepcin de "prescripcin de la deuda o slo de la accin ejecutiva". En cambio,
contina el recurso, en el procedimiento de la Ley General de Bancos el legislador no
exige acompaar un ttulo ejecutivo para iniciar el juicio, puesto que el mutuo puede
otorgarse por instrumento privado y aade que lo que debe otorgarse por escritura pblica
es la hipoteca con que se garantice el crdito, pero ella no es el ttulo en el cual consta la
obligacin cuyo pago se requiere al deudor moroso. Explica el recurrente que en el
procedimiento que regula la citada ley, el deudor puede oponer la excepcin de
prescripcin, pero no la de tres aos para la accin ejecutiva como lo resolvi el fallo
censurado, sino que es la de cinco aos para la accin ordinaria establecida en el artculo
2515 del Cdigo Civil, puesto que, a su juicio, para iniciar un procedimiento de la Ley
General de bancos el acreedor no requiere ttulo ejecutivo.
Asevera que el yerro se produce en la sentencia al acoger la prescripcin de tres aos
contemplada para la accin ejecutiva, en circunstancias que la que indica la mencionada
ley de bancos es la de la accin ordinaria de cinco aos, tiempo que no ha transcurrido
desde que se notific la demanda antes de que se cumpliera dicho plazo.
Segundo: Que para la acertada resolucin de este asunto es necesario tener presente
que la accin ejecutiva de desposeimiento deducida por el demandante Banco del Estado
se basa en la escritura pblica de 10/1/1974, en virtud de la cual la Asociacin de Ahorro
y Prstamo, dio en prstamo a Hctor Ral Fernndez Jeria la cantidad de 1.486576
Escudos, pagadera en el plazo de veintiocho aos, por medio de dividendos anticipados
mensuales y sucesivos con inters del 7 % anual, establecindose un inters penal en
caso de mora; para garantizar el cumplimiento de todas y cada una de las obligaciones
contradas en el contrato de mutuo el deudor constituy hipoteca sobre el bien raz
consistente en el Lote N 24, Hijuela Poniente, Santa Julia, plano 468, Via del Mar. Con
fecha 16/9/1983, por escritura pblica, el deudor repact la deuda y reconoci adeudar
como saldo nico el equivalente a 42,713553 UF, pagadero en 225 cuotas mensuales y
sucesivas a partir del 1/7/1983, con el inters que expresa. El mutuario Daz se encuentra
en mora en el pago de los dividendos mensuales a contar del mes de diciembre de 1985,
debiendo al 31/8/1998 la cantidad de UF 1.789.
Con fecha 11/12/1989 la Asociacin Nacional de Ahorro y Prstamo transfiri mediante
endoso efectuado a favor del Banco del Estado, el crdito que en autos se cobra.
El Banco del Estado dedujo anteriormente, en el expediente Rol N 22.005-94 del Primer
Juzgado Civil de Valparaso, requerimiento conforme la Ley General Bancos por la
228
232
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Clusula de Aceleracin
C. Suprema
3., 4. y 5.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
Tercero: Que es un hecho pacfico y por ende incontrovertido que la clusula de
aceleracin contenida en el ttulo ejecutivo dispone que: " El simple retardo y/o mora en el
pago ntegro y oportuno de todo o parte de las cuotas en la (s) poca (s) pactada (s) para
ello dar derecho al Banco de Chile para exigir sin ms trmite el pago total de la deuda o
del saldo a que se halle reducida, considerndose en tal evento la obligacin como de
plazo vencido, pudiendo protestar y/o presentar a cobro este pagar."
Cuarto: Que la denominada clusula de aceleracin, tal como lo ha sostenido
regularmente esta Corte Suprema, puede extenderse valindose de formas verbales
imperativas o facultativas, de manera que en el primer caso, verificado el hecho del
233
REGLA .
a.- La clusula de aceleracin puede ser redactada valindose de formas verbales
imperativas o facultativas, de manera que en el primer caso, verificado el hecho del
retardo o la mora, la obligacin se har ntegramente exigible y, en el segundo, esa total
exigibilidad depender del hecho que el titular de la acreencia exprese su intencin de
acelerar el crdito.
b.- La clusula que seala que: el simple retardo y/o mora en el pago de todo o parte de
las cuotas en la poca pactada para ello dar el derecho al acreedor para exigir sin ms
trmite el pago total de la deuda o del saldo, por su terminologa y naturaleza jurdica de
caducidad convencional del plazo, tiene carcter imperativo.
234
4.
CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 08 abril 2009. M.J. N 19915
Corte Suprema
Fallo:
Explica que se pact que el simple retardo y/o mora en el pago ntegro y oportuno de todo
o parte de una de las cuotas en la poca fijada para ello, facultar al Banco de Chile para
exigir sin ms trmite el pago total de la deuda o del saldo a que se halle reducida,
considerando la obligacin como si fuera de plazo vencido.
Termina indicando que el deudor no pag la cuota nmero dos con vencimiento el
28/11/2005.
235
Considerando:
Primero: Que en el recurso en estudio el recurrente sostiene que se han vulnerado los
artculos 464 N 17 del Cdigo de Procedimiento Civil y artculos 98, 100 y 107 de la Ley
18.092.
cuota.
Refiere, que el artculo 100 del mismo cuerpo legal, aplicable en la especie por expresa
disposicin del artculo 107 de la Ley 18.092, dispone que la prescripcin se interrumpe
respecto de quien se notifique la demanda judicial, de forma tal que esta demanda se
notific slo el 26/3/2007 y se dej de pagar la cuota con vencimiento el da 28/11/2005.
Contina el recurrente sealando que al haber transcurrido ms de un ao desde el
primer incumplimiento, la deuda completa se encontraba prescrita, toda vez que el
ejecutante hizo efectiva la clusula de aceleracin contemplada en el pagar.
Segundo: Que para la adecuada resolucin del recurso resulta til tener en consideracin
los siguientes antecedentes que rolan en autos:
a) la ejecutada sociedad ejecutada ces en el pago de las cuotas en que fue dividida la
obligacin contrada con ocasin de la suscripcin del pagar N 11510, a contar del
vencimiento de fecha 28/11/2005.
Sptimo: Que el artculo 2514 del Cdigo Civil, dispone: "La prescripcin que extingue las
acciones y derechos ajenos exige solamente cierto lapso de tiempo durante el cual no se
hayan ejercido dichas acciones. Se cuenta este tiempo desde que la obligacin se haya
hecho exigible". Por su parte el artculo 98 de la Ley 18.092 establece que el plazo de
prescripcin de las acciones cambiarias, que incluye al pagar por indicacin expresa del
artculo 107 de la ley aludida, es de un ao contado desde el da del vencimiento del
documento, hecho que evidentemente se va a producir en el caso del pago en cuotas -en
el evento de haberse pactado una clusula de aceleracin de naturaleza imperativa-, por
la mora en la solucin de una de ellas;
238
Se previene que los Ministros Sr. Juica y Sr. Araya concurren al acogimiento del recurso
de casacin en el fondo, teniendo para ello nicamente presente:
1.- Que el inciso segundo del artculo 105 de la Ley 18.092 precepta que el pagar
puede tener tambin vencimientos sucesivos y, en tal caso, para que el no pago de unas
de las cuotas haga exigible el monto total insoluto, es necesario que as se exprese en el
documento. Esta norma, est relacionada con uno de los requisitos que debe contener
este ttulo de crdito, cual es la poca del pago, segn lo dispone el N 3 del artculo
102 de la aludida ley. De este modo, la excepcionalidad prevista por la prime ra norma,
est relacionada nicamente con el plazo fijado para la solucin del crdito y en el solo
evento de que se haya pactado su pago en cuotas, las que, como seala el inciso final del
mismo artculo 105, sin este pacto, cada parcialidad morosa ser protestada
separadamente. En sntesis, el sentido de la clusula de aceleracin es hacer exigible una
obligacin que se paga en cuotas, por el solo hecho de la mora de una de ellas, como si
todo el crdito fuere exigible, aunque no se haya producido la mora de las restantes
parcialidades y este es el derecho que le asiste al acreedor, el de poder cobrar un total o
un saldo insoluto de una obligacin, en el solo evento de la mora de una de las cuotas en
que se dividi el crdito, cualquiera sea el sentido facultativo o imperativo en que se haya
redactado la clusula en discusin;
2.- Que por otra parte, la redaccin del artculo 98 de la Ley 18.092 confirma la
aseveracin contenida en el fundamento anterior, puesto que esta norma establece que el
plazo de prescripcin de las acciones cambiarias y que incluye al pagar por indicacin
expresa del artculo 107 de la ley aludida, es de un ao contado desde el da del
vencimiento del documento, hecho que evidentemente se va a producir en el caso del
239
pago en cuotas, por la mora de una de ellas cuando se haya pactado clusula de
aceleracin;
3.- Que estando demostrado en el presente caso, que la exigibilidad de la obligacin que
se demanda se produjo el 28/11/2005 y, por ende, provoc el vencimiento del documento,
al notificarse a los demandados con fecha 26/3/2007, resulta evidente que la accin
ejecutiva proveniente del pagar que se cobra en estos autos se hallaba extinguida por el
transcurso del ao que contempla el artculo 98 de la Ley 18.092 y, en esta situacin, la
sentencia recurrida al rechazar la excepcin de prescripcin opuesta a la ejecucin ha
incurrido en el error de derecho que se le imputa y, por ende, procede que el arbitrio
interpuesto sea acogido. Regstrese.
N 1.710-08.
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sres. Milton Juica
A., Sergio Muoz G., Juan Araya E. y Guillermo Silva G. y Abogado Integrante Sr. Jorge
Medina C.
SENTENCIA DE REEMPLAZO
Vistos:
Se reproduce la sentencia de primer grado con excepcin del fundamento sptimo que se
240
eliminan.
Lo expresado en los motivos tercero al octavo del fallo de casacin que antecede y
considerando, adems, que en la especie la deudora principal dej de pagar la cuota
segunda, vencida el 28/11/2005 y de ah en adelante las restantes, por lo que, atendidos
los trminos imperativos y obligatorios de la clusula de aceleracin pactada, el retardo se
produjo a partir de dicha fecha, oportunidad desde la cual corresponde en el caso en
particular computar el plazo de prescripcin, el que transcurri en exceso al 26/3/2007,
da en que se notific la demanda.
Y de conformidad, adems, con lo que disponen los artculo 186 del Cdigo de
Procedimiento Civil, 98, 100, 105 y 107 de la Ley 18.092 y 2514 del Cdigo Civil, se
declara: Que se revoca, la sentencia apelada de 21/8/2007, escrita de fojas 42, en cuanto
rechaza la excepcin de prescripcin de la accin opuesta por la ejecutada; y en su lugar
se declara que se la acoge, con costas y, en consecuencia, se rechaza en todas sus
partes la demanda deducida en lo principal de fojas 7 y se absuelve de la ejecucin al
ejecutado, debiendo alzarse los embargos, en su caso.
Se previene que los Ministros Sr. Juica y Sr. Araya concurren a la revocacin del fallo de
primer grado, pero teniendo para ello nicamente en consideracin los fundamentos
esgrimidos en la prevencin contenida en el fallo de casacin.
Rol N 1710-08.
241
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sres. Milton Juica
A., Sergio Muoz G., Juan Araya E. y Guillermo Silva G. y Abogado Integrante Sr. Jorge
Medina C.
242
Tribunal
C. Concepcin
Considerando
4., 5. y 7.
lo expresado en el artculo 2124 inciso segundo del Cdigo Civil, como todo acto en
ejecucin del mandato. 6 Que el nico antecedente que existe en autos en cuanto a la
aceptacin tcita, esto es a la ejecucin del mandato, lo constituye el requerimiento de la
inscripcin efectuada por el propio comprador, segn se lee del documento de fojas 10,
en que textualmente se indica "Requiri esta inscripcin don Nicols San Martn Daza".
7 Que as las cosas, y si bien es cierto que la oferta de mandato se hizo por la vendedora
manifestando su intencin de que el mandatario pudiese actuar incluso en caso de
fallecimiento de sta, no lo es menos que tal oferta no aparece aceptada en vida de la
mandataria, cobrando aplicacin las normas que regulan la oferta y la formacin del
consentimiento contenidas en los artculos 97 y siguientes del Cdigo de Comercio, lo que
significa que la oferta pierde vigencia por su caducidad, la que ocurre, entre otros casos,
cuando acontece la muerte del oferente antes de haber sido aceptada de manera expresa
o tcita. En otras palabras, el consentimiento quedar formado cuando la oferta es
aceptada por el destinatario, aceptacin que debe darse en forma oportuna, vigente la
oferta y de manera pura y simple.
REGLA .
a.- La clusula por la cual se otorga facultades al portador de copia autorizada de una
escritura para su inscripcin, es una oferta de mandato a una persona en ese momento
indeterminada pero que se obligar, perfeccionando el contrato, al efectuar su aceptacin.
Mal puede considerarse configurado el mandato con la sola firma de la escritura pblica
de compraventa por el comprador, pues no se indic la persona del mandatario.
b.- Cuando una oferta se hizo manifestando la intencin de que el mandatario pudiese
actuar incluso en caso de fallecimiento del mandante, la oferta pierde vigencia cuando
acontece la muerte del mandante.
c.- El consentimiento quedar formado cuando la oferta es aceptada por el destinatario,
aceptacin que debe darse en forma oportuna, vigente la oferta y de manera pura y
simple.
4. CITA DE FUENTE.
C. Concepcin, 21 abril 2009. M.J. N 20254124
244
ejecucin del mandato. 6 Que el nico antecedente que existe en autos en cuanto a la
aceptacin tcita, esto es a la ejecucin del mandato, lo constituye el requerimiento de la
inscripcin efectuada por el propio comprador, segn se lee del documento de fojas 10,
en que textualmente se indica "Requiri esta inscripcin don Nicols San Martn Daza".
7 Que as las cosas, y si bien es cierto que la oferta de mandato se hizo por la vendedora
manifestando su intencin de que el mandatario pudiese actuar incluso en caso de
fallecimiento de sta, no lo es menos que tal oferta no aparece aceptada en vida de la
mandataria, cobrando aplicacin las normas que regulan la oferta y la formacin del
consentimiento contenidas en los artculos 97 y siguientes del Cdigo de Comercio, lo que
significa que la oferta pierde vigencia por su caducidad, la que ocurre, entre otros casos,
cuando acontece la muerte del oferente antes de haber sido aceptada de manera expresa
o tcita. En otras palabras, el consentimiento quedar formado cuando la oferta es
aceptada por el destinatario, aceptacin que debe darse en forma oportuna, vigente la
oferta y de manera pura y simple.
8 Que de acuerdo a lo razonado, resulta forzoso concluir que la inscripcin fue solicitada
por quien ya no tena facultades para ello, pues nunca se form el consentimiento que
habra perfeccionado el contrato de mandato, dado que la oferta para su celebracin
haba caducado el 4 de febrero de 2000.
9 Que as las cosas, debe concluirse que los bienes de la vendedora doa Luca Daza
Beltrn pasaron a su muerte, esto es el 4 de febrero de 2000, a ser de propiedad de su
sucesin, es decir de las personas que la ley llama a sucederla, por haber operado el
modo de adquirir de sucesin por causa de muerte. Ello significa que, habiendo fallecido
la oferente antes de que la demandada aceptara la oferta de celebracin de un contrato
de mandato, a la poca de la ejecucin del mandato el bien raz en cuestin ya era de
propiedad de la sucesin, sin perjuicio de quedar sta obligada tambin a las cargas que
pudieran pesar en la vendedora, entre las cuales, que duda cabe, figuraba la de efectuar
la tradicin del bien en cuestin.
10 Que contribuye a reafirmar las ideas ya reseadas lo dispuesto en los artculos 670,
675, 686 y 1824 del Cdigo Civil, en orden a entender que el contrato de compraventa
constituye solamente el ttulo que permite la transferencia del dominio, siendo necesario
que despus opere el modo de adquirir tradicin, que constituye un acto jurdico que
como cualquier otro acto bilateral, requiere del consentimiento de ambas partes
involucradas, esto es, del vendedor y del comprador. Como la vendedora ya haba
fallecido no poda prestarlo, sin que sea procedente que actuara el propio comprador en
virtud de la aceptacin de un mandato cuya oferta ya haba caducado.
11 Que as las cosas, a la poca en que se practic la inscripcin de la escritura de
compraventa, esto es, el 28 de marzo de 2002, la oferta de mandato otorgada por la
vendedora ya no exista, por lo que mal poda existir tampoco un mandato, de lo que
resulta forzoso concluir que tal inscripcin ser realiz sin el consentimiento de esa parte,
lo que se traduce en la nulidad de la tradicin, correspondiendo acogerse la demanda de
nulidad deducida en lo principal del escrito de fojas 17. En consecuencia, resulta
improcedente pronunciarse sobre la demanda subsidiaria deducida en el primer otros de
la misma presentacin. Por estas consideraciones, disposiciones legales citadas y visto lo
186 y siguientes del Cdigo de Procedimiento Civil, SE REVOCA, en lo apelado, la
sentencia de quince de septiembre de dos mil seis escrita de fojas 67 a 69 vuelta, en su
lugar se decide que se acoge la demanda principal deducida en lo principal del escrito de
246
247
Considerando
5. y 6.
3.
3. Sent. de reemplazo
emana de ste, esto es, la calidad de acreedor, nace a favor del beneficiario, quien es
ajeno a aquella relacin. D icho de otro modo, el estipulante contrata directamente con el
promitente para que los aspectos favorables de la convencin se radiquen en forma
definitiva en el patrimonio del beneficiario, quien los acepta para s. As, existen dos
partes en el contrato quienes vern afectados sus patrimonios de diversas formas, pero
los efectos favorables se radicarn en un tercero, quien adquiere directamente el derecho
que emana de la convencin, de modo que el promitente se compromete a favor de este
tercero, persona que ser su acreedor una vez que medie su aceptacin. El derecho nace
desde la celebracin del contrato y la aceptacin del beneficiario pone trmino a la
facultad del estipulante y promitente de dejar sin efecto el contrato.
De todo lo anterior se desprende que el beneficiario nicamente adquiere la calidad de tal,
esto es, de acreedor del derecho que tiene su fuente en el contrato y no asume obligacin
alguna, es decir, no es deudor del estipulante ni del promitente.
Quinto: Que, en efecto, la figura de cesin de contrato tiene lugar cuando uno de los
contratantes, con el consentimiento del otro, traspasa los derechos y obligaciones
emanados de un contrato bilateral a un tercero, que pasa a ocupar en la convencin la
misma situacin jurdica del cedente. Por la cesin de contrato, en consecuencia, se
traspasa la calidad ntegra de contratante. Si bien la eficacia o validez de esta institucin
fue inicialmente resistida, sobre la base del impedimento de aceptar la cesin de deudas,
lo cierto es que la prctica frecuente, fundada en el principio de la autonoma de la
voluntad, reconoce la posibilidad de que las partes convengan la subsistencia de una
obligacin con un nuevo deudor y, en este evento, ser el mismo contrato el que
subsistir, con otro contratante. Asimismo, ciertas normas de la legislacin positiva
permiten inferir que esta figura no es extraa al ordenamiento, como ocurre con el artculo
1946 del Cdigo Civil -que se refiere explcitamente a la facultad del arrendador de ceder
el contrato si se le ha concedido esta prorrogativa en forma expresa- y con el artculo
404 del Cdigo de Comercio -que permite al socio ceder su inters en la sociedad, previa
autorizacin de todos los dems socios-.
Ahora bien, atendido que en la convenciones bilaterales, por definicin del artculo
1439 del Cdigo Civil, cada parte reviste al mismo tiempo la calidad de acreedora y
deudora, la cesin del contrato implica que el cedente traspasa al cesionario tanto sus
derechos como sus obligaciones, y en ello radica su diferencia fundamental con la simple
cesin de crditos o con la novacin por cambio de deudor.
Sexto: Que adems de suponer la existencia de un pacto bilateral, para que la cesin de
contrato sea eficaz se exige que las prestaciones emanadas del mismo no se hubieren
ejecutado, esto es, que el contrato est pendiente de ejecucin, o bien, en el evento de
tratarse de una convencin de tracto sucesivo -cual es el caso de la de autos-, no haberse
agotado o terminado, y, cuestin que cobra esencial relevancia para la resolucin del
presente recurso, el consentimiento de las tres partes. En efecto, es evidente que para
que la cesin de contrato produzca efectos es necesario, en primer trmino, el
consentimiento del cedente, pues l es quien se desprende de sus derechos. Asimismo,
resulta indispensable la voluntad del contratante cedido, en razn del aspecto pasivo del
contrato, ya que de lo contrario el cedente se liberara de sus obligaciones sin
intervencin del acreedor de ellas, y del cesionario, toda vez que adquiere los derechos
de que se desprende el cesionario y las obligaciones correspondientes al contrato de que
se trate. El cesionario, como se indic, pasa a ocupar la misma situacin jurdica del
cedente, esto es, lo reemplaza en el contrato y, en consecuencia, puede exigir el
249
cumplimiento de los crditos que a su favor emanen de ste y queda obligado a cumplir
las obligaciones que de ste tambin derivan. Es por lo anterior que resulta tan crucial
exigir el consentimiento del cesionario, pues no slo adquiere derechos, sino que tambin
contrae obligaciones.
Sentencia de Remplazo
Tercero: Que en cuanto al lucro cesante, se ha dicho que ste corresponde a la utilidad
que deja de percibir el acreedor por el incumplimiento o cumplimiento tardo de la
obligacin, o, dicho de otro modo, es la ganancia frustrada sobre la base de lo que
probablemente habra ganado el acreedor. Como ha sostenido esta Corte Suprema, el
lucro cesante suele ser difcil de acreditar, pues debe tenerse siempre presente que uno
de los requisitos para que el dao resulte indemnizable es que ste sea cierto y en la
alegacin de lucro cesante siemp re se alega una hiptesis de ganancia, razn por la cual
se postula por la doctrina que su apreciacin queda entregada por entero al criterio del
juez.
En efecto, en el conflicto que pueda suscitarse entre seguridad y justicia es posible
aceptar que el resarcimiento no sea total a cambio de no caer en un enriquecimiento
injusto de la vctima, riesgo al cual evidentemente se est expuesto cuando se trabaja
sobre la base de hiptesis. No obstante lo anterior, si bien lo dicho puede satisfacer las
exigencias de seguridad o certeza, ante la lgica y necesaria distincin entre un inters
fundado con rigor y las ganancias dudosas e inseguras, las expectativas de justicia
impiden negar, siempre y en todo caso, la indemnizacin por lucro cesante. Es por ello
que la regulacin de este tipo de indemnizacin supone emplear un juicio de probabilidad
a fin de arribar a la conclusin de ser presumible una cierta utilidad no obtenida o, como
se dijo, frustrada, con una resarcibilidad calculada de manera estimativa sobre la base de
presunciones.
De este modo, puede afirmarse que el lucro cesante es la privacin de las ganancias que
habra obtenido el acreedor de la prestacin una vez incorporada sta a su patrimonio,
mediante el cumplimiento efectivo de la obligacin, esto es, la ganancia legtima para l,
menos los gastos efectuados para producirla. As, la jurisprudencia ha calificado de lucro
cesante indemnizable, en caso de trmino anticipado de un arrendamiento, la renta de
arriendo por el tiempo que le faltaba al contrato para expirar, ejemplo que resulta
perfectamente aplicable al caso de autos.
REGLA .
a.- En la estipulacin a favor de otro establecida en el artculo 1449 del cdigo civil
intervienen tres interesados: El estipulante, quien es el que contrata a nombre del tercero;
el interesado, que es quien adquirir la calidad de deudor del tercero; y el beneficiario,
quien es el tercero que adquirir todos los beneficios emanados del contrato. As, existen
dos partes en el contrato quienes vern afectados sus patrimonios de diversas formas,
pero los efectos favorables se radicarn en un tercero, quien adquiere directamente el
derecho que emana de la convencin, de modo que el promitente se compromete a favor
de este tercero, persona que ser su acreedor una vez que medie su aceptacin. El
derecho nace desde la celebracin del contrato y la aceptacin del beneficiario pone
trmino a la facultad del estipulante y promitente de dejar sin efecto el contrato. De todo lo
anterior se desprende que el beneficiario nicamente adquiere la calidad de tal, esto es,
de acreedor del derecho que tiene su fuente en el contrato y no asume obligacin alguna,
250
ordinario, caratulados "Aseo Industrial Technoclean Chile Ltda. con Lefersa S.A.",
comparencen Francisco Manuel Chizzini Plaza y Wladimir Milenio Franulic Branicic, en
representacin de la primera de las compaas nombradas, y deducen demanda de
terminacin de contrato con indemnizacin de perjuicios contra Lefersa S.A. fundados en
los siguientes hechos.
El 1/1/1998, exponen, las partes del juicio firmaron un contrato de prestacin de servicios
de limpieza por una duracin de dos aos, el que fue reemplaza do el 1/7/1998 por otro
similar, en el cual se dej constancia que los servicios se prestaran en dos plantas: la
industrial, ubicada en Avenida Eduardo Frei Montalva N 9290, y la de levaduras, situada
calle Salvador Gutirrez N 5091. En relacin a esta ltima, agregan, las partes
declararon conocer que se trasladara a la de Avenida Eduardo Frei Montalva N 9290; sin
embargo, dicho traslado no se verific en agosto de 1998, como se haba programado
inicialmente, sino slo a partir del mes de octubre. En efecto, explican los actores, de
acuerdo a lo estipulado en la clusula dcima del contrato, a contar aproximadamente del
1/8/1998, la planta de levaduras de calle Salvador Gutirrez N 5091 se trasladara a
Avenida Eduardo Frei Montalva N 9290, debiendo facturarse desde ese momento los
servicios a Gist Brocades Industrial S.A.
El contrato, sigue la demanda, tendra una duracin de dos aos, contados desde el
1/7/1998, renovable automticamente por otro perodo igual, salvo aviso dado con treinta
das de anticipacin. No obstante estar vigente la convencin, contina el libelo, la
demandada unilateralmente le puso trmino mediante carta de 30/11/1998, en la cual
comunica tal decisin "en relacin a los servicios prestados en las plantas de Salvador
Gutirrez N 5091 y Panamericana Norte N 9290, a contar del 1/1/1999", incumpliendo
de esta forma el contrato de prestacin de servicios, especficamente la clusula
duodcima.
Adems de este incumplimiento, termina la demanda, Lefersa S.A. ha incurrido en otra
transgresin, al negarse a pagar los servicios prestados, lo que se traduce en la falta de
solucin tres facturas, correspondientes a los meses de diciembre de 1998 y enero y
febrero de 1999. Piden, en consecuencia, se declare terminado el contrato y se condene a
la demandada al pago de $1.677.264.- a ttulo de dao material emergente, $45.983.822.a ttulo de lucro cesante y $20.000.000.- por dao moral.
Al contestar, Lefersa S.A. alega, en primer trmino, la falta de legitimacin pasiva,
fundada en que el contrato, en la aludida clusula dcima, dispone textualmente: "el
contratista declara conocer los lugares donde se ejecutarn las labores, como tambin las
condiciones en que stas se desarrollan y se obliga a no interferir con las funciones
normales de produccin de Lefersa S.A., sin perjuicio de lo anterior las partes declaran
conocer que a contar del 1/8/1998, aproximadamente, la planta de levaduras se trasladar
a Avda. Pdte. Eduardo Frei Montalva N 9290. En ese momento los servicios se
prestarn, en iguales condiciones y valores de esta ltima, facturndose el valor
respectivo en lo sucesivo a Gist Brocades Industrial S.A. En la oportunidad que ocurra
este evento, se subentender que Lefersa S.A. ha sido reemplazada ntegramente, en
todos sus derechos y obligaciones por Gist Brocades Industrial S.A.". Ahora bien,
argumenta, la nueva planta de levaduras comenz a funcionar en octubre de 1998 en el
inmueble de Avenida Eduardo Frei Montalva N 9290 y, en consecuencia, a partir de esa
fecha la sociedad Gist Brocades Industrial S.A. subrog a Lefersa S.A. en todos los
derechos y obligaciones de la convencin. Confirma lo anterior, finaliza la demandada, el
hecho que la carta de 30/11/1998, mediante la cual se da aviso de trmino del contrato, la
252
enva Gist Brocades Industrial S.A. y no Lefersa S.A. En subsidio alega inoponibilidad del
contrato, inexistencia de responsabilidad e inexistencia de daos o de relacin de
causalidad.
Por sentencia de 9/12/2002, escrita a fojas 459, la seora Juez Suplente del referido
tribunal rechaz en todas sus partes la demanda, con costas. Apelado este fallo por la
actora, una de las Salas de la Corte de Apelaciones de Santiago, en sentencia de
4/10/2007, que se lee a fojas 565, lo revoc en la parte que condenaba a la demandante
al pago de las costas de la causa, declarando en su lugar que queda eximida de
satisfacerlas, y lo confirm en lo dems.
En contra de esta ltima decisin la parte demandante ha deducido recurso de casacin
en el fondo.
Se orden traer los autos en relacin.
Considerando:
Primero: Que en el recurso de casacin en el fondo se denuncia infringido, en primer
trmino, el artculo 578 del Cdigo Civil y, al efecto, argumenta la recurrente que la accin
personal emanada del contrato de prestacin de servicios slo poda ser dirigida en contra
de la nica persona que por su sola voluntad se oblig a cumplir con la prestacin debida,
como lo fue Lefersa S.A., y no en contra de Gist Brocades Industrial S.A., que no contrajo
obligacin alguna respecto de la demandante. Esta compaa, sigue el recurso, no
asumi ninguna de las obligaciones correlativas que emanaban para Lefersa S.A. en su
calidad de contratante de la actora, siendo la principal de ellas la de pagar el precio como
contraprestacin equivalente a los servicios de aseo que esta ltima prestaba en las
plantas sealadas en la clusula primera de la convencin.
Seguidamente se alega en el recurso la contravencin al artculo 1449 del Cdigo Civil. A
juicio de la recurrente el fallo supone erradamente que se hizo efectiva la estipulacin que
Lefersa S.A. hizo a favor de Gist Brocades Industrial S.A. en la clusula dcima del
contrato, por cuanto esta figura nunca se perfeccion, precisamente porque esta ltima
sociedad no acept lo que la demandada estipul a su favor, siendo prueba fehaciente de
lo anterior el hecho que Lefersa S.A., con posterioridad a octubre de 1998 y durante toda
la vigencia del contrato mantuvo su posicin de contratante, al asumir el pago ntegro de
los servicios que le prest la demandante.
En este sentido, sostiene la recurrente, estando acreditado que Gist Brocades Industrial
S.A. no demand el cumplimiento de lo que Lefersa S.A. haba estipulado a su favor, ni
realiz acto alguno del que pudiera presumirse su aceptacin tcita, ya que se mantuvo al
margen de la convencin sin contraer ninguna de las obligaciones que eran exigibles para
Lefersa S.A., resulta evidente que no se perfeccion la estipulacin, dado que, como
consta en autos, Gist Brocades Industrial S.A. no exigi que las facturas se extendieran a
su nombre, ni pag ninguna de las trece que efectivamente se emitieron con posterioridad
a octubre de 1998. La estipulacin perdi validez, termina el recurso sobre el punto,
precisamente por la propia actitud que asumi la demandada de pagar los servicios que
prestaba la actora, lo que, por cierto, revela una clara revocacin de la estipulacin. A
continuacin en el recurso se denuncia vulnerado el artculo 1489 del Cdigo Civil,
invocndose las mismas razones anteriores, al declararse erradamente en la sentencia
que el derecho alternativo que confiere esta norma slo poda dirigirse contra Gist
253
ejecucin del aseo, limpieza y mantencin de las instalaciones de una planta industrial,
ubicada en Avenida Presidente Eduardo Frei Montalva N 9290, Quilicura, y de una plata
de levaduras ubicada en Salvador Gutirrez N 5091, Quinta Normal. Los valores de los
servicios contratados, agregan, se convinieron en $3.900.000.- y $2.296.799.-, mensuales
ms impuesto al valor agregado, respectivamente, reajustables segn el ndice de precios
al consumidor. La duracin del contrato, siguen los jueces, se acord en dos aos
contados desde la fecha del instrumento, es decir, desde el 1/7/1998, plazo renovable
tcita y sucesivamente por perodos iguales de dos aos, salvo aviso previo en contrario
por cualquiera de las partes.
En octubre de 1998, establece el fallo, la planta de levaduras ubicada en Salvador
Gutirrez N 5091 se traslad a operar a la planta industrial de Avenida Presidente
Eduardo Frei Montalva N 9290. Con ello, concluyen, resulta comprobada la verificacin
del hecho previsto en la clusula dcima del contrato, que daba lugar al reemplazo de
Lefersa S.A. por Gist Brocades Industrial S.A. en los derechos y obligaciones emanados
de la referida convencin; consecuencialmente, Gist Brocades Industrial S.A. reemplaz
ntegramente, en todos sus derechos y obligaciones, a Lefersa S.A. a contar del sealado
mes de octubre de 1998. A continuacin los magistrados razonan que si bien es cierto
aparece acreditado con el mrito de trece facturas que la demandante sigui facturando
los servicios de aseo a nombre de la demandada, no se atender su alegacin de haberlo
efectuado as por expresas instrucciones de esta ltima -estableciendo con ello una
ejecucin contractual diversa de la literalmente convenida-, pues este hecho no result
probado en el juicio. La fotocopia del cheque girado contra la cuenta corriente de Lefersa
S.A. el 15/12/1998, a nombre de la demandante, esto es, con posterioridad a la entrada
en vigencia de la clusula dcima -agregan-, no resulta pertinente al efecto, pues este
mero hecho del pago no conduce por s mismo necesariamente a concluir que Lefersa
S.A. continuara vinculada en virtud del contrato con Aseo Industrial Technoclean Chile
Ltda., puesto que tal como contempla el artculo 1572 del Cdigo Civil, cualquier
persona puede pagar por el deudor, an sin su conocimiento o contra su voluntad y an a
pesar del acreedor y, por lo dems, se desconocen las relaciones y tratos que pudieran
existir o no respecto de este punto entre Lefersa S.A. y Gist Brocades Industrial S.A.
Por otra parte, expresa la sentencia, la circunstancia invocada por Aseo Industrial
Technoclean Chile Ltda. de haber continuado prestando servicios de aseo en las
instalaciones de la planta de Salvador Gutirrez N 5091 con posterioridad al mes de
octubre de 1998, no desvirta lo razonado precedentemente, puesto que ello se relaciona
con hechos diversos del que importa para el litigio, que es la efectividad de haberse
trasladado la planta industrial que all funcionaba a un domicilio distinto. En ese sentido,
concluyen magistrados sobre el punto, la ejecucin de servicios de aseo en forma
extraordinaria se encuentra ampliamente corroborada por la prueba acompaada por la
propia demandante.
Establecido que a la poca de producirse la notificacin de trmino del contrato (carta de
30/11/1998), finaliza el fallo, la parte de Lefersa S.A. haba sido reemplazada
ntegramente en todos sus derechos y obligaciones por Gist Brocades Industrial S.A.,
resulta que el eventual incumplimiento contractual que de ello deriva no puede atribuirse a
quien, a esa fecha, precisamente no le asista la obligacin de cumplimiento. El derecho
alternativo del artculo 1489 del Cdigo Civil, finaliza, slo puede reclamarse de la
persona que, por un hecho suyo o la sola disposicin de la ley, ha contrado la obligacin
correlativa; en la especie, la parte que a partir del mes de octubre de 1998 haba
reemplazado "ntegramente en todos sus derechos y obligaciones" a Lefersa S.A., esto
255
exigir el consentimiento del cesionario, pues no slo adquiere derechos, sino que tambin
contrae obligaciones.
Sptimo: Que, en este contexto, cabe recordar que los jueces de la instancia slo han
fijado como hecho de la causa, en lo que a la aplicacin de la clusula dcima del
contrato se refiere, que en octubre de 1998 la planta de levaduras ubicada en Salvador
Gutirrez N 5091 se traslad a operar a la planta industrial de Avenida Presidente
Eduardo Frei Montalva N 9290. Sobre la base de este hecho, como tambin se indic,
los magistrados concluyen que resulta comprobada la verificacin del hecho previsto en la
aludida clusula dcima y que, consecuencialmente, Gist Brocades Industrial S.A.
reemplaz ntegramente, en todos sus derechos y obligaciones, a Lefersa S.A. a contar
del sealado mes de octubre de 1998.
Ahora bien, esta ltima conclusin, en tanto no se ha tenido por establecido como hecho
acreditado que Gist Brocades Industrial S.A. consisti en adquirir la calidad de cesionario
de los derechos y obligaciones que para Lefersa S.A. emanaban del contrato de 1/7/1998,
resulta errada, pues, segn se afirm en el fundamento sexto precedente y por las
razones que all se consignan, slo una manifestacin de voluntad explcita en tal sentido
puede otorgar a un tercero la calidad de cesionario de la posicin contractual de una de
las partes de la convencin.
En razn de lo anterior, no cabe sino concluir que la demandante Aseo Industrial
Technoclean Chile Ltda. continu ligada con la demandada Lefersa S.A. en virtud del
contrato de 1/7/1998 con posterioridad a octubre de 1998, no obstante haberse verificado
el hecho previsto en la clusula dcima de ese pacto, pues la parte llamada a ocupar la
posicin contractual de esta ltima, asumiendo tanto sus derechos como sus
obligaciones, no consinti en ello.
Octavo: Que, de este modo, la falta de pago de las facturas extendidas a nombre de
Lefersa S.A. correspondientes a los meses de diciembre de 1998 y enero y febrero de
1999, circunstancia que el fallo impugnado reconoce -no obstante sealar,
equivocadamente como se concluy, que a esta compaa no le asista la obligacin de
solucionarlas-, constituye el hecho que hace operar la condicin resolutoria envuelta en
todo contrato bilateral de no cumplirse por uno de los contratantes lo pactado, prevista en
el inciso 1 del artculo 1489 del Cdigo Civil. Esta norma ha sido denunciada como
infringida por la recurrente y, efectivamente, ha resultado vulnerada, pues no obstante
configurarse sus presupuestos de hecho, los sentenciadores han dejado de aplicarla,
incurriendo con ello en error de derecho.
Noveno: Que en virtud de lo concluido en el fundamento que antecede y teniendo
asimismo en consideracin que el yerro advertido ha influido sustancialmente en lo
dispositivo de la decisin, el recurso de casacin ser acogido. Por estas consideraciones
y visto, adems, lo dispuesto en las normas lega les citadas y en los artculos 764, 765,
767 y 805 del Cdigo de Procedimiento Civil, se acoge el recurso de casacin en el fondo
deducido por la parte demandante en lo principal de la presentacin de fojas 566, contra
la sentencia de 4/12/2007, escrita a fojas 565, la que se invalida y se reemplaza por la
que se dicta acto continuo, sin nueva vista, pero separadamente.
Acordada contra el voto del Ministro seor Juica, quien fue de opinin de rechazar el
recurso interpuesto, teniendo para ello en consideracin los siguientes fundamentos:
258
1.- Que en tanto las partes del juicio, en las calidades recprocas de acreedora y
deudora, concurrieron al acuerdo y firma del contrato de arrendamiento de servicios,
conocan a cabalidad el contenido de la clusula dcima del mismo, especficamente, que
en evento de trasladarse la planta de polvos ubicada en Salvador Gutirrez N 5091, a la
de levaduras de Avenida Eduardo Frei Montalva N 9290.
2.- Que, en consecuencia, verificada esta condicin, la parte de Aseo Industrial
Technoclean Chile Ltda. debi facturar sus servicios a Gist Brocades Industrial S.A., la
que, desde ese momento, se convirti en la acreedora de los servicios de aseo
contratados y en la deudora del precio pactado por ellos. De este modo, la demandada
Lefersa S.A. se desvincul jurdicamente de la actora y, en razn de ello, no ha podido ser
sujeto pasivo de la accin de terminacin de contrato ejercida, como acertadamente, en
concepto del disidente, se concluye en la sentencia impugnada.
Regstrese.
Redaccin a cargo del Ministro seor Muoz.
N 6895-07.-.
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sres. Milton Juica
A., Sergio Muoz G., Juan Araya E. y Guillermo Silva G. y Abogado Integrante Sr.
Domingo Hernndez E. SENTENCIA DE REEMPLAZO
Santiago, 28 de abril de 2009.En cumplimiento a lo dispuesto en el artculo 785 del Cdigo de Procedimiento Civil, se
dicta el siguiente fallo de reemplazo.
Vistos:
Se reproduce la sentencia de primera instancia, con excepcin de sus motivos dcimo
cuarto a vigsimo segundo, que se eliminan. Se reproducen, asimismo, las
consideraciones contenidas en los fundamentos tercero a sptimo del fallo de casacin
que antecede
Y teniendo adems presente:
Primero: Que encontrndose probado que la parte demandada no cumpli con la
obligacin que le impona la clusula tercera del contrato de Servicio de Aseo Industrial
celebrado con la demandante, consistente en el pago de un precio por los servicios
prestados, corresponde no slo declarar su terminacin, en razn de haber sobrevenido el
hecho en que consiste la condicin resolutoria envuelta en toda convencin bilateral, sino
tambin condenar a la parte incumplidora al resarcimiento de los perjuicios sufridos por la
contratante diligente, de conformidad con la regla que al efecto prescribe el inciso 2 del
artculo 1489 del Cdigo Civil.
Segundo: Que, en primer trmino y en lo que al dao material emergente se refiere, ste
est constituido por el valor de las tres facturas emitidas a nombre de Lefersa S.A. y no
pagadas, por un total de $1.677.264.-, impuesto al valor agregado incluido, el que se tiene
por acreditado con el mrito de los documentos acompaados por la actora a bajo los
259
261
Tribunal
C. Suprema
Considerando
4.
prescripcin consiste en que se extinga por esta va la accin que nace de la obligacin
cuyo cumplimiento la hipoteca cauciona.
12. CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 01 junio 2009. M.J. N 20228
266
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Intereses moratorios.
C. Suprema
15. REGLA .
a.- El presente juicio tuvo por finalidad solicitar al tribunal que se declare que los
demandados deben pagar, en forma solidaria, los honorarios profesionales
correspondientes a los servicios prestados por asesoras jurdicas. Dichos honorarios
fueron fijados por el tribunal de instancia en la cantidad de $8.300.000.
Enrique Alcalde Undurraga y de don Jos Miguel Alcalde Undurraga a fin de que sean
condenados a pagar solidariamente la suma equivalente en pesos moneda nacional a 700
unidades de fomento, ms intereses corrientes para operaciones reajustables contados
desde la fecha en que los honorarios fueron cobrados el da 28 de mayo de 2002, ms
costas de esta causa.
Mediante sentencia de seis de octubre de dos mil tres, rectificada el quince de octubre del
mismo ao, la jueza interina acogi la demanda condenando a los demandados a pagar
en forma solidaria la suma de $8.300.000 ms los intereses devengados desde la
notificacin de la demanda, con costas.
Apelado el fallo por los demandados una de las Salas de la Corte de Apelaciones de
Santiago, lo confirm.
En contra de la referida sentencia la antedicha parte ha deducido recurso de casacin en
el fondo.
Se trajeron los autos en relacin.
CONSIDERANDO:
PRIMERO: Que el recurrente sostiene que la sentencia censurada ha sido dictada con
infraccin a los artculos 1448 y 1551 del Cdigo Civil y 144 del Cdigo de Procedimiento
Civil.
Indica que se ha vulnerado el artculo 1448 del Cdigo sustantivo en relacin con el
artculo 40 de la Ley 18.046, al no analizar que en autos se encontraba probado que los
servicios profesionales por los cuales se haban fijado los honorarios cobrados haban
sido contratados con la demandante por los seores Enrique y Jos Miguel Alcalde
Undurraga, en su calidad de directores de la sociedad "Inversiones pticas S.A." y en su
representacin y que los servicios profesionales fueron prestados a favor exclusivo de la
sociedad "Inversiones pticas S.A.", en el juicio ejecutivo caratulado "Inversiones
Metropolitanas S.A. con Inversiones pticas S.A.", Rol N 4054-2000, seguidos ante el 8
Juzgado Civil de Santiago.
Luego, agrega que el tribunal deja de aplicar las disposiciones citadas, a que establecen
la representacin como una modalidad de los actos jurdicos, en virtud de la cual el
obligado a cumplir el contrato celebrado en la especie es la sociedad "Inversiones pticas
S.A." en su calidad de representada y no quienes intervinieron por ella como sus
representantes.
En seguida denuncia como vulnerado el artculo 1551 del Cdigo Civil, que establece el
momento en que el deudor est en mora, seala que la sentencia al fijar los honorarios y
los intereses desde la poca de la demanda, deja de aplicar dicho precepto, pues los
interese moratorios slo proceden en los casos que dicha norma seala, pero no bajo el
presente caso, pues al no encontrarse fijados los honorarios y habindose establecido
slo por la sentencia, se est en mora slo desde la resolucin que los fija queda
ejecutoriada, circunstancia que a la fecha no ha sucedido.
269
Refiere que el tribunal deja de aplicar disposiciones expresas sobre la mora que lo
autorizan a fijar intereses slo si la parte de un contrato ha dejado de cumplirlo estando
obligado a ello y siendo la obligacin lquida, determinada o determinable y actualmente
exigible, lo que no ocurra en el caso de autos.
Por ltimo, estima transgredido el artculo 144 del Cdigo Civil, puesto que la demandante
no ha obtenido nada de lo demandado y la demandada obtuvo lo que solicit al Tribunal
que no era otra cosa que se fijaran los honorarios que le correspondan a la demandante.
Pide se anule y dicte sentencia de reemplazo que se fijan los honorarios por los servicios
prestados por la actora a la sociedad Inversiones pticas S.A. en la suma de $8.300.000
ms los intereses corrientes para operaciones no reajustables desde que quede
ejecutoriada la presente sentencia sin costas;
SEGUNDO: Que la afirmacin de los demandados en cuanto habran contratado los
servicios profesionales de la demandante, abogada doa Paulina Combo Lpez, en su
calidad de representantes de Inversiones pticas S.A. y no ha su propio nombre, no se
encuentra establecida como un hecho de la causa; por consiguiente, no puede deducirse
a su respecto, infraccin a las normas del artculo 1448 del Cdigo Civil en relacin con el
artculo 40 de la Ley 18.046 sobre Sociedades Annimas, como pretende el recurso de
casacin en el fondo, en estudio;
TERCERO: Que en efecto, en el motivo tercero del fallo de primer grado, confirmado sin
modificaciones por la sentencia de segunda instancia, qued de manifiesto la prestacin
de servicios profesionales por parte de doa Paulina Colombo Lpez en el juicio ejecutivo
Rol N 4054-2000 seguidos ante el Octavo Juzgado Civil de Santiago;
CUARTO: Que estos servicios profesionales son los que motivan la presente contienda de
cobro de honorarios a los demandados de autos y quienes han sostenido haber actuado
en representacin de la Sociedad Inversiones pticas S.A. para contratar a la
demandante para asumir su defensa en el referido juicio, y no ha ttulo personal;
QUINTO: Que, en la sentencia objetada mediante este recurso, se rechaz la excepcin
dilatoria de falta de legitimacin pasiva, opuesta por los demandados, por cuanto se
estim que con ella se pretenda destruir la accin misma, atacando el derecho de
accionar del actor y no la de corregir vicios del procedimiento;
SEXTO: Que, como se ha constatado, no constituye un hecho de la causa, la
circunstancia esgrimida por los demandados, para afirmar su falta de legitimacin pasiva,
de haber contratado con la actora en representacin de la Sociedad demandada en
aquellos autos ejecutivos seguidos en el Octavo Juzgado Civil de esta ciudad, por
consiguiente, su alegacin en este captulo del recurso, carece de sustento fctico y en
razn de ello cabe desechar las infracciones de leyes antes indicadas.
Al efecto, no se han invocado infracciones legales que permitan modificar la resolucin de
los tribunales del fondo, invocando falta de consideraciones o fundamentaciones, ni
tampoco infracciones a las leyes reguladoras de la prueba que permitieran corregirla para
dar por acreditados los hechos alegados por los recurrentes;
270
SPTIMO: Que por no encontrarse plenamente acreditado que los demandados hubieren
actuado en representacin de Inversiones pticas S.A., no pueden trasladarse a esta
sociedad los efectos de la contratacin de prestacin de servicios profesionales que
acordaron con la demandante de autos, radicndose en ellos las respectivas
responsabilidades contractuales;
OCTAVO: Que por lo razonado no resulta admisible concluir que se ha incurrido en la
infraccin del artculo 1448 del Cdigo Civil, en relacin con el artculo 40 de la Ley sobre
Sociedades Annimas;
NOVENO: Que en cuanto a la segunda infraccin legal se debe recordar que es cuestin
no debatida que la decisin sobre las costas no integra la sentencia definitiva de un juicio,
puesto que se trata de la decisin de un asunto accesorio a lo principal del debate y por
ende, corresponde desechar este captulo de casacin en el fondo, relacionado con el
artculo 144 de Cdigo de Procedimiento Civil y as se declarar en definitiva;
DCIMO: Que en cuanto a la infraccin del artculo 1551 del Cdigo Civil, es necesario
tener presente que segn lo dispone en sus N 1, que es necesario requerir al deudor
para constituirlo en mora y en su N 3 que el deudor se encuentra en mora cuando ha
sido judicialmente reconvenido por el acreedor;
UNDCIMO: Que, el presente juicio, tuvo por finalidad solicitar del tribunal que se declare
que los demandados deben pagar, en forma solidaria, los honorarios profesionales
correspondientes a la defensa que asumi la demandante en el juicio seguido en contra
de Inversiones pticas S.A. y que estim en 700 unidades de fomento;
DUODCIMO: Que los demandados al contestar, respondieron que como no aceptaron la
proposicin de honorarios efectuada por su contra parte, es el tribunal quien debe fijarlos
y ponderando que estos slo se refieren a la defensa del juicio ejecutivo Rol N 40542000 del Octavo Juzgado Civil de Santiago y que se encuentra en apelacin ante la Corte
de Santiago;
DECIMOTERCERO: Que con estas premisas, se fijaron los honorarios en la cantidad de
$8.300.000 a pagar en forma solidaria por los demandados.
DECIMOCUARTO: Que se agreg a la determinacin de los honorarios, la obligacin de
pagar intereses, incurrindose por los sentenciadores en infraccin del nmero 1 en
relacin con el nmero tres del artculo 1551 del Cdigo Civil , dado que como se record
en el fundamento dcimo de este fallo, en el caso de autos era necesario requerir
judicialmente a los demandados, pero tambin resultaba necesario precisar con certeza el
monto adeudado, lo que ocurrir desde el momento en que la presente sentencia quede
ejecutoriada.
DECIMO QUINTO: Que de lo expuesto, aparece procedente acoger el recurso en estudio
por la infraccin legal citada y, anular en la parte decisoria de la sentencia cuestionada, la
declaracin referida a la poca desde la cual se deben calcular los intereses y dictar la
correspondiente sentencia de reemplazo.
Y visto, lo dispuesto en los artculo 764, 765, 767, 785 y 805 del Cdigo de Procedimiento
Civil, se acoge el recurso de casacin en el fondo, interpuesto por la demandada en lo
271
principal de fojas 191, en contra de la sentencia de veinticuatro de enero de dos mil ocho,
que se lee a fojas 188 y se la anula, dictndose a continuacin, separadamente y sin
nueva vista, sentencia de reemplazo.
Se previene que el Ministro seor Muoz no comparte el motivo decimocuarto y concurre
al acuerdo, teniendo, adems, presente:
1.- Que tradicionalmente se ha entendido por obligacin la relacin por la que una
persona se encuentra en la necesidad jurdica de realizar una prestacin en favor de otra,
la cual se puede solicitar sea cumplida en forma imperativa tanto para reclamarla, como
para prestarla. Los sujetos son el acreedor y el deudor; el objeto es la prestacin debida;
el vnculo jurdico importa reconocer el sistema conforme al cual se la contrajo y conforme
al cual puede solicitarse su cumplimiento.
En lo relativo al objeto de la obligacin se ha distinguido en cuanto al hecho, abstencin o
cosa en que consiste, que se califica como objeto "mediato" de ella y la prestacin misma
precisamente determinada, que se denomina como objeto "inmediato" (Abeliuk, Las
Obligaciones, pgina 36). Cobra particular importancia el carcter prximo de la
prestacin, puesto que constituye la circunstancia que exactamente permitir operen los
efectos de las obligaciones, se establezcan todas sus particularidades y determina la
naturaleza de la decisin adoptada por la judicatura.
2.- Que en el referido orden de ideas resulta indispensable hacer referencia que, tanto la
doctrina como la jurisprudencia, han distinguido dos grandes tipos de pretensiones que
dan origen a igual naturaleza de sentencias civiles: de cognicin y ejecucin, que por su
parte, estas ltimas, pueden ser desestimatorias o estimatorias. Las primeras se dividen
en declarativas, constitutivas y de condena.
La "sentencia definitiva declarativa estimatoria civil es aquella por la cual el tribunal,
estimando fundada la pretensin extraprocesal, declara acerca de la existencia o
inexistencia (segn sea lo pretendido) de una situacin jurdica", "estas pretensiones (y
sentencias) tienen como especial caracterstica la de que basta una declaracin del
tribunal para que sean satisfechas", "slo se limitar a declarar certeza sobre un estado o
situacin determinada", tiene su origen en el artculo 256 de la ordenanza procesal
alemana de 1877 que dispuso: "Se podr demandar la declaracin de existencia o
inexistencia de una relacin jurdica o el reconocimiento de la autenticidad o la
declaracin de falsedad de un documento, s i el demandante tiene un inters jurdico en
que la relacin jurdica o la autenticidad o la falsedad de un documento sea declarada
inmediatamente por resolucin judicial", sin perjuicio de encontrar sus antecedentes en las
instituciones romanas de las formulas prejudiciales, conforme lo ensean Scialoja, Alsina
y Chiovenda.
La "sentencia definitiva estimatoria constitutiva civil es aquella por la cual el tribunal,
estimando fundada la pretensin extraprocesal, crea, modifica o extingue una situacin
jurdica", "estas pretensiones procesales se llaman constitutivas porque en los tres casos
se solicita, en ltimo trmino, una constitucin", la creacin de un estado de cosas
inexistentes, puesto que "si se pide que se modifique una situacin, se est reclamando la
creacin de una nueva en cuanto la anterior sea modificada; si se pide la extincin, se
reclama, aunque indirectamente, la constitucin de un nuevo estado de cosas", como por
ejemplo si se pide la legitimacin de un hijo, la impugnacin de la paternidad, la nulidad
272
273
274
Tribunal
C. Suprema
C. Suprema
Considerando
3. y 4
3.
hipotecada.
Cuarto: Que la pretensin en el sentido que la denominada clusula de aceleracin deja
sin embargo intacto el derecho del deudor para pagar los dividendos atrasados y evitar
con ello el remate, de lo cual infiere el recurrente que el ttulo no le empece, constituye
una peticin de principios, pero del todo ajena al texto del artculo 103 de la Ley General
de Bancos y al contexto en que ste se inserta, representado por el principio de
autonoma de la voluntad.
En efecto, la clusula en cuestin constituye una modalidad pactada para anticipar el
vencimiento de una obligacin, autorizando al acreedor para perseguir el cumplimiento del
total adeudado, en caso que el deudor incurra en mora o retardo en el pago de cualquiera
de las cuotas en que se dividi convencionalmente el crdito. Su inclusin consensuada
en el contrato de mutuo que dio origen a la obligacin materia de este juicio, no es sino
manifestacin del clsico principio de autonoma de la voluntad, ya mencionado, en virtud
del cual los contratantes convinieron en la modalidad antes descrita que, por emanar de
un contrato legalmente celebrado, representa una ley para las partes, al tenor del artculo
1545 del Cdigo Civil.
En este escenario, la demandante no ha hecho otra cosa que ejercer el derecho inherente
al pacto de aceleracin, acordado libremente entre las partes, sin que se advierta de qu
modo la norma del artculo 103 de la Ley General de Bancos pudiera alterar esta
conclusin, en el sentido de limitar el derecho de cobro del acreedor a slo las cuotas o
dividendos impagos a esa fecha, privndosele de la posibilidad de exigir la solucin total
de su crdito, que es precisamente el objetivo tenido a la vista al acordar su exigibilidad
anticipada, mediante la estipulacin aludida.
REGLA .
a.- El carcter accesorio de la hipoteca importa que la garanta otorgada por medio de la
constitucin del derecho real lo es respecto de la obligacin principal, a la cual
precisamente accede, aspecto que importa el reconocimiento de todas las modalidades
en que se encuentre pactada aqulla
b.- La clusula de aceleracin constituye una modalidad pactada para anticipar el
vencimiento de una obligacin, autorizando al acreedor para perseguir el cumplimiento del
total adeudado, en caso que el deudor incurra en mora o retardo en el pago de cualquiera
de las cuotas en que se dividi convencionalmente el crdito. Su inclusin consensuada
en un contrato de mutuo no es sino manifestacin del clsico principio de autonoma de la
voluntad.
No se advierte de qu modo la norma del artculo 103 de la Ley General de Bancos
pudiera alterar esta conclusin, en el sentido de limitar el derecho de cobro del acreedor a
slo las cuotas o dividendos impagos a esa fecha, privndosele de la posibilidad de exigir
la solucin total de su crdito, que es precisamente el objetivo tenido a la vista al acordar
su exigibilidad anticipada, mediante la estipulacin aludida.
4. CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 22 junio 2009. M.J. N 20465
276
277
Con todo y aun en el supuesto de entenderse que la causal desarrollada es la del numeral
6 y no la del 4 del artculo 768 -pese a que el escrito de casacin reproduce
textualmente este ltimo ordinal, en fundamento del recurso- es pertinente agregar que
aquel motivo de nulidad formal tampoco concurre en la especie. Para concluir de esta
manera, es suficiente recordar que la resolucin tildada de invlida se limita a rechazar la
excepcin de no empecerle el ttulo al ejecutado, fundada en el artculo 103, inciso 2, N
3 de la Ley General de Bancos, a partir de los mismos argumentos que se hicieron valer
respecto de un incidente de nulidad que fue rechazado, antecedente que la decisin
impugnada alude tangencialmente, si bien funda su rechazo en otras consideraciones
adicionales.
Como fuere, el recurso no desarrolla la forma en que la sentencia recada en la excepcin
sera contraria a otra anterior, pasada en autoridad de cosa juzgada y de contenido
opuesto. Antes bien, repara en una presunta ilcita similitud de contenidos entre dos
resoluciones, con motivo de actuaciones diversas de la misma parte, que fueron
desestimadas por falta de fundamentos, situacin que no origina, por cierto, decisiones
contradictorias ni menos perjuicio al recurrente, que es lo que precisamente se trata de
precaver a travs del instituto de la cosa juzgada.
Este razonamiento adicional confluye, adems, al rechazo de este motivo de casacin. II.En cuanto al recurso de casacin en el fondo:
Tercero: Que la argumentacin sustentante de la casacin en el fondo reproduce, en
forma prcticamente literal, lo dicho en la apelacin de fojas 96, centrada en el presunto
error de derecho cometido en la aplicacin del artculo 103, de la Ley General de Bancos.
Aunque impreciso en la determinacin del especfico error de derecho en que habra
incurrido la sentencia objetada, lo medular del cuestionamiento radicara en el cobro que
se hace a la garante hipotecaria, en juicio especial hipotecario, del total de la deuda
contrada por el deudor principal con el Banco ejecutante, con motivo de la mora en el
pago de las cuotas en que se dividi el crdito, en cuya virtud la entidad acreedora hizo
aplicacin de la clusula de aceleracin pactada en el contrato de mutuo.
El concepto de la recurrente, el artculo 103 de la Ley General de Bancos dispone que lo
que debe pagarse en el trmino de 10 das por el deudor hipotecario no es el total de la
deuda, sino que "las cuotas o dividendos" vencidos y sus intereses. La incorporacin de
una clusula de aceleracin -en esta perspectiva- no puede alterar las leyes de
procedimiento, que son de orden pblico, de modo tal que el derecho de la deudora
hipotecaria de pagar slo los dividendos atrasados no puede verse afectado por aqulla,
sindole por tanto inoponible el ttulo invocado, que constara del propio expediente. No
obstante la escasa claridad del planteamiento, es del caso puntualizar, como ha quedado
sentado en pronunciamientos anteriores de esta Corte, que el procedimiento especial
hipotecario del Ttulo XIII de la ley especial mencionada no excluye la estipulacin de la
aceleracin del plazo, pues aunque el artculo 103 se refiere a las cuotas o dividendos en
el plazo convenido, esta ltima alusin se remite a lo acordado por las partes, por lo cual,
si pactaron aceleracin y el acreedor la hace efectiva, todas las cuotas o dividendos no
estn satisfechos en el plazo estipulado, circunstancia que autoriza cobrarlos
ntegramente en este procedimiento ejecutivo. Sera adems absurda la conclusin de
que no podra recurrirse a l por la existencia de una modalidad, como lo es el plazo, que
slo existe cuando las partes as lo han concordado, y que un mecanismo procesal
previsto para dar agilidad al cobro de la deuda del deudor principal, no pudiera utilizarse
278
por el banco acreedor contra el deudor hipotecario, quedando obligado a iniciar un nuevo
juicio cada vez que dicho obligado principal dejare de pagar una cuota o dividendo (En
este sentido, puede verse las sentencias de 3/1/2006, en causa Rol N 4071-2003,
caratulada "Banco de Chile con Neudorfer Retamal Franz" y de 27/12/2006, en autos Rol
N 1205-2004, caratulados "Banco Santander-Chile con Muoz Poblete, Rodrigo Juan").
Es ms, el carcter accesorio de la hipoteca importa que la garanta otorgada por medio
de la constitucin del derecho real lo es respecto de la obligacin principal, a la cual
precisamente accede, aspecto que importa el reconocimiento de todas las modalidades
en que se encuentre pactada aqulla, entre las que se cuenta la clusula de aceleracin,
la que es preciso considerar y, por lo mismo, tiene plena vigencia en cuanto al deudor
principal y el tercer poseedor de la finca hipotecada.
Cuarto: Que la pretensin en el sentido que la denominada clusula de aceleracin deja
sin embargo intacto el derecho del deudor para pagar los dividendos atrasados y evitar
con ello el remate, de lo cual infiere el recurrente que el ttulo no le empece, constituye
una peticin de principios, pero del todo ajena al texto del artculo 103 de la Ley General
de Bancos y al contexto en que ste se inserta, representado por el principio de
autonoma de la voluntad.
En efecto, la clusula en cuestin constituye una modalidad pactada para anticipar el
vencimiento de una obligacin, autorizando al acreedor para perseguir el cumplimiento del
total adeudado, en caso que el deudor incurra en mora o retardo en el pago de cualquiera
de las cuotas en que se dividi convencionalmente el crdito. Su inclusin consensuada
en el contrato de mutuo que dio origen a la obligacin materia de este juicio, no es sino
manifestacin del clsico principio de autonoma de la voluntad, ya mencionado, en virtud
del cual los contratantes convinieron en la modalidad antes descrita que, por emanar de
un contrato legalmente celebrado, representa una ley para las partes, al tenor del artculo
1545 del Cdigo Civil.
En este escenario, la demandante no ha hecho otra cosa que ejercer el derecho inherente
al pacto de aceleracin, acordado libremente entre las partes, sin que se advierta de qu
modo la norma del artculo 103 de la Ley General de Bancos pudiera alterar esta
conclusin, en el sentido de limitar el derecho de cobro del acreedor a slo las cuotas o
dividendos impagos a esa fecha, privndosele de la posibilidad de exigir la solucin total
de su crdito, que es precisamente el objetivo tenido a la vista al acordar su exigibilidad
anticipada, mediante la estipulacin aludida.
Quinto: Que, por consiguiente, la sentencia en casacin no ha dado incorrecta aplicacin
al artculo 103 de la Ley General de Bancos, toda vez que el ttulo esgrimido por la
institucin ejecutante le empece al deudor, conclusin que impide que el recurso
presentado por infraccin de esa ley pueda ser acogido.
Por estas consideraciones y visto, adems, lo dispuesto en las normas legales citadas y
en los artculo 764, 765, 766, 767 y 808 del Cdigo de Procedimiento Civil, se rechazan
los recursos de casacin en la forma y en el fondo deducidos por la parte ejecutada en los
principal y primer otros, respectivamente, de la presentacin de fojas 119, contra la
sentencia de 24/1/2008, escrita a fojas 118.
Regstrese y devulvase.
Redaccin del abogado integrante seor Hernndez.
279
N 1719-08.-.
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sres. Milton Juica
A., Sergio Muoz G., Sra. Margarita Herreros M., y Guillermo Silva G. y Abogado
Integrante Sr. Domingo Hernndez E.
No firma el Abogado Integrante Sr. Hernndez, no obstante haber concurrido a la vista del
recurso y acuerdo del fallo, por estar ausente.
Autorizado por la Secretaria Sra. Rosa Mara Pinto Egusquiza.
280
Tribunal
C. Suprema
Voto Disidente
Considerando
4.
1. y 2.
283
284
Segundo: Que para una adecuada inteligencia del asunto y resolucin del recurso de
casacin en el fondo interpuesto, cabe tener presente las siguientes circunstancias del
proceso:
1.- Que la deudora principal -Pirotecnia Chilena Limitada-, ces en el pago de las cuotas
en que fue subdividida la obligacin contrada con ocasin de la suscripcin el 1/8/2001
del pagar a plazo N 1000003123339 (Lnea de Refinanciamiento CORFO), a contar del
vencimiento de fecha 1/8/2002.
2.- Que la demanda de autos fue presentada a distribucin en la Corte de Apelaciones de
Valparaso el 20/10/2003.
3.- Que los ejecutados de autos -deudora principal y avalistas y codeudores solidariosfueron notificados y requeridos de pago el 20/5/2005;
Tercero: Que no fue materia de controversia que la clusula de aceleracin contenida en
el ttulo ejecutivo dispone que: "En caso de mora o simple retardo en el pago de todo o
parte del capital y/o una cualquiera de sus cuotas de capital y/o de los intereses que
establece este pagar, el acreedor tendr la facultad de hacer exigible el total de lo
adeudado, el que en ese evento se considerar de plazo vencido para todos los efectos
legales";
Cuarto: Que la "clusula de aceleracin" encuentra como finalidad el hacer exigible el total
de una deuda como si estuviera vencida no obstante existir plazos pendientes, por el no
pago, retardo o mora en el pago de una o ms de las cuotas en que se encuentre dividido
el servicio de la obligacin. Esta modalidad de anticipar el vencimiento de la obligacin, en
la eventualidad de verificarse la situacin antes referida, constituye un derecho que le
asiste al acreedor, de poder cobrar adelantadamente el total o saldo insoluto de la
obligacin y fija el tiempo inicial desde el cual debe contarse el plazo de prescripcin;
Quinto: Que el artculo 2514 del Cdigo Civil, dispone: "La prescripcin que extingue las
acciones y derechos ajenos exige solamente cierto lapso de tiempo durante el cual no se
hayan ejercido dichas acciones. Se cuenta este tiempo desde que la obligacin se haya
hecho exigible".
Por su parte el artculo 98 de la Ley 18.092 establece que el plazo de prescripcin de las
acciones cambiarias -que incluye al pagar, por indicacin expresa del artculo 107 de la
ley aludida-, es de un ao contado desde el da del vencimiento del documento, hecho
que evidentemente se va a producir en el caso del pago en cuotas, por la mora de una de
ellas cuando se haya pactado clusula de aceleracin.
El inciso segundo del artculo 105 del aludido cuerpo legal precepta, a su vez, que el
pagar puede tener tambin vencimientos sucesivos, y en tal caso, para que el no pago
de unas de las cuotas haga exigible el monto total insoluto, es necesario que as se
exprese en el documento. Esta norma, est relacionado con uno de los requisitos que
debe contener este ttulo de crdito, cual es la poca del pago, segn lo dispone el N 3
del artculo 102 de la aludida ley. De este modo, la excepcionalidad prevista por la
primera norma, est relacionada nicamente con el plazo fijado para la solucin del
crdito y en el slo evento de que se haya pactado su pago en cuotas, las que como
seala el inciso final del mismo artculo 105, sin este pacto, cada parcialidad morosa ser
protestada separadamente;
285
Sexto: Que estas argumentaciones son bastantes para fundar la infraccin de ley que
denuncia el recurrente en el tercer captulo de su recurso, para lo cual se tiene en
consideracin, adems, que es un punto pacfico y no controvertido, que la deudora
principal dej de pagar la cuota vencida el 1/8/2002 y de ah en adelante, por lo que el
retardo se produjo a partir de dicha fecha, oportunidad desde la cual corresponde
computar el plazo de prescripcin, el que transcurri en exceso al 20/5/2005, oportunidad
en que se notific la demanda, motivos estos por los cuales proceda acoger la excepcin
deducida de prescripcin de la accin ejecutiva;
Sptimo: Que estos errores de concepto constituyen trasgresin a las disposiciones
legales indicadas como infringidas por la recurrente, en especial a los artculos 98 y 105
de la Ley 18.092, vulneracin de derecho que ha influido sustancialmente en lo dispositivo
del fallo, desde que la equivocada aplicacin efectuada de tales preceptos ha llevado a
los sentenciadores de alzada a hacer lugar slo parcialmente a la excepcin de
prescripcin opuesta por los ejecutados, en circunstancias que proceda admitirla
totalmente y declarar prescrita la accin ejecutiva deducida en autos, razn por la cual el
recurso en estudio deber ser acogido;
Octavo: Que habindose aceptado la casacin en el fondo por uno de los tres captulos
que se impugnan en el recurso, resulta innecesario pronunciarse acerca de los dems
errores de derecho que a decir del recurrente se habran cometido en la sentencia
objetada. Por estas consideraciones y de conformidad, adems, con lo dispuesto en los
artculos 764 , 765 , 767 , 785 y 805 del Cdigo de Procedimiento Civil, se
acoge el recurso de casacin en el fondo, interpuesto en la peticin principal de la
presentacin de fojas 395, por el abogado don Juan Oriel Tapia Tapia, en representacin
de los ejecutados Oscar Eric Pelaez Saavedra, Eduardo Alfredo Abarca Vargas y de la
sociedad Pirotecnia Chilena Limitada, en contra de la sentencia de fecha 30/1/2008, que
se lee a fojas 390, la que se invalida y se reemplaza por la que se dicta a continuacin,
separadamente y sin nueva vista.
Se previene que el Ministro Sr. Sergio Muoz Gajardo, concurre al acogimiento del
recurso de casacin en el fondo, teniendo para ello nicamente presente:
1.- Que la denominada clusula de aceleracin puede extenderse valindose de formas
verbales imperativas o facultativas, tal como lo ha sostenido regularmente esta Corte
Suprema, de manera que en el primer caso, verificado el hecho del retardo o la mora, la
obligacin se har ntegramente exigible independientemente de que el acreedor
manifieste su voluntad en orden a ejercer el derecho que le confiere la estipulacin y, en
el segundo, esa total exigibilidad depender del hecho que el titular de la acreencia
exprese su intencin de acelerar el crdito.
2.- Que establecida la clusula de aceleracin en los trminos en que se reproduce en el
razonamiento tercero, por su terminologa y naturaleza jurdica, sta tiene el carcter de
facultativa para el acreedor y, en consecuencia, desde la fecha en que aquel manifest su
intencin de acelerar el crdito, mediante la correspondiente interposicin de la demanda,
comenz, asimismo, a correr el plazo de prescripcin extintiva de su accin. 3.- Que
estando asentado en el presente caso que la presentacin de la demanda a distribucin
en la Corte de Apelaciones de Valparaso se produjo el 20/10/2003, atendidos los
trminos facultativos de la clusula de aceleracin pactada, desde dicha oportunidad
corresponde computar el plazo de prescripcin, el que transcurri en exceso al 20/5/2005,
286
al notificarse y requerirse de pago a los deudores, por lo que resulta evidente que la
accin ejecutiva proveniente del pagar que se cobra en estos autos se hallaba
extinguida, por el transcurso del ao que contempla el artculo 98 de la ley 18.092 y, en
esta situacin, la sentencia recurrida al aceptar slo parcialmente la excepcin de
prescripcin opuesta por los ejecutados, ha incurrido en el error de derecho que se le
imputa y, por ende, procede que el arbitrio interpuesto sea acogido.
Regstrese.
Redaccin a cargo del Abogado Integrante Sr. Benito Mauriz.
N 2.341-08.Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sres. Milton Juica
A., Sergio Muoz G. y Juan Araya E. y Abogados Integrantes Sres. Benito Mauriz A. y
Nelson Pozo S.
No firman los Abogados Integrantes Sres. Mauriz y Pozo, no obstante haber concurrido a
la vista del recurso y acuerdo del fallo, por estar ambos ausentes.
Autorizado por la Secretaria Sra. Rosa Mara Pinto Egusquiza.
SENTENCIA DE REEMPLAZO
Santiago, 23 de junio de 2009.En cumplimiento a lo resuelto y atendido lo dispuesto en el artculo 785 del Cdigo de
Procedimiento Civil, se procede a dictar la sentencia de reemplazo que corresponde
conforme a la ley.
Visto:
Se reproduce la sentencia de primer grado y su resolucin complementaria de fojas 372,
con excepcin, la primera, de los fundamentos undcimo y duodcimo que se eliminan y,
la segunda, previa exclusin de sus motivos cuarto, quinto y sexto.
Se eliminan, adems, las resoluciones complementarias de 28/6/2007 y de 5/11/2007,
escritas a fojas 364 y 388, respectivamente. Y se tiene en su lugar y, adems, presente:
-En cuanto a la apelacin del ejecutante:
1.- Que, segn consta a fojas 6 y siguientes, el 23/7/2003 se redujo a escritura pblica el
acta de sesin extraordinaria de directorio, nmero 81, del Banco Santander Chile,
celebrada el 30/6/2003, en la que se acept la renuncia del gerente general del Banco,
don Fernando Caas, a partir del 31/7/2003 y se design como nuevo gerente general a
don Oscar Von Crismar Carvajal, a partir del 1/8/2003, revocndose a contar de esta
ltima fecha, "el mandato y las facultades conferidas al anterior Gerente don Fernando
Caas Berkowitz, por escritura pblica de fecha 29/1/1998".
2.- Que a fojas 12 y siguientes, rola mandato judicial otorgado por escritura pblica, el
14/8/2002, por el Banco Santander, representado por su gerente general don Fernando
287
Caas Berkowitz, al abogado don Juan Antonio Rivera Barros, quien acciona en estos
autos, en representacin del Banco Santander-Chile, conduciendo este mandato.
3.- Que el artculo 2163 N 9 del Cdigo Civil establece "El mandato termina: N 9. Por la
cesacin de las funciones del mandante, si el mandato ha sido dado en ejercicio de ellas",
y por tanto, lo que ha de resolverse en relacin a la excepcin prevista en el artculo 464
N 2 del Cdigo de Procedimiento Civil y esgrimida por los ejecutados, dice relacin con la
vigencia del mandato en cuya virtud ha comparecido el abogado don Juan Antonio Rivera,
lo que a su vez, est ntimamente, ligado con la determinacin de la identidad del
mandante, es decir, si ste lo es el ex gerente general, don Fernando Caas Berkowitz,
situacin en que el mandato no habra estado vigente a la poca de presentacin de la
demanda, o si por el contrario, el mandante es el Banco Santander-Chile, en cuyo caso la
revocacin ya mencionada y la cesacin en el cargo de gerente del seor Caas, no han
producido el efecto de poner trmino al mandato del abogado compareciente.
4.- Que el tribunal a quo, al resolver de la manera en que lo ha hecho, ha interpretado y
aplicado la disposicin del artculo 2163 N 9 del Cdigo Civil acogiendo, en tal virtud, la
excepcin del artculo 464 N 2 del Cdigo de Procedimiento Civil, deducida por la
ejecutada, por entender que el abogado Rivera Barros a la fecha de interposicin de la
demanda careca de representacin y personera suficiente para comparecer por el Banco
ejecutante, pues su mandante, el gerente general Caas, a su vez no tena, en ese
momento, la representacin legal de la institucin.
5.- Que, en opinin de esta Corte, la disposicin del artculo 2163 N 9 del Cdigo Civil
ha sido errneamente interpretada y aplicada, ya que la cesacin en sus funciones del
gerente Caas Berkowitz no produjo la terminacin del mandato otorgado al abogado
Rivera Barros por la siguientes razones: a).- Porque como consta del documento
acompaado a fojas 12, el mandato fue otorgado al abogado con fecha 14/8/2002, esto
es, cuando el gerente ejerca validamente la representacin legal del Banco y la demanda
aparece presentada al el 20/10/2003, es decir, con posterioridad al otorgamiento del
mandato;
b).- Porque la mencionada norma legal exige para que termine el mandato que quien cese
en sus funciones sea "el mandante" y en el caso sub lite tal calidad no la ostenta el
gerente general de la institucin bancaria, sino el Banco, pues se trata en la especie de un
acto ejecutado por el representante de una persona jurdica que, de acuerdo con el
artculo 552 del Cdigo Civil, debe considerarse como un acto ejecutado por sta;
c).- Porque de conformidad con el artculo 1448 del mismo cdigo, el acto del
representante "produce respecto del representado iguales efectos que si hubiera
contratado el mismo" y, por ende, el mandante es el representado Banco y no la persona
del representante, gerente general de dicho Banco;
-En cuanto a la apelacin de lo s ejecutados:
6.- Que en la resolucin de la excepcin prevista en el artculo 464 N 17 del Cdigo de
Procedimiento Civil ha de considerarse lo reflexionado en los motivos segundo al sexto
del fallo de casacin que antecede y el hecho no controvertido que la deudora principal
dej de pagar la cuota vencida el 1/8/2002 y de ah en adelante las restantes, por lo que
el retardo se produjo a partir de dicha fecha, oportunidad desde la cual corresponde
computar el plazo de prescripcin, el que transcurri en exceso al 20/5/2005, oportunidad
288
289
Tribunal
C. Arica
C. Arica
Considerando
2., 3. y 4.
6.
que adquiere.". Es decir que tal conocimiento, segn estos sentenciadores, no deriva del
conocimiento del artculo 136 de la Ley de Urbanismo y Construccin, que debe ser
conocido por todos, segn lo seala el artculo 8 del Cdigo Civil que establece que
"Nadie podr alegar ignorancia de la ley despus que sta haya entrado en vigencia.",
sino que de los antecedentes recientemente sealados.
SEXTO: Que en relacin a la accin reivindicatoria, es aplicable en la especie lo dispuesto
en el artculo 1468 del Cdigo Civil, en cuanto "No podr repetirse lo que se haya dado o
pagado por un objeto o causa ilcita a sabiendas". En efecto, y segn se ha razonado en
los motivos precedentes, la demandante se encontraba imposibilitada de alegar la nulidad
por haber tenido conocimiento "al momento de contratar- del defecto que hoy alega; y sin
perjuicio, de declararse esta sancin de oficio, la ley le impide aprovecharse y
beneficiarse de sus efectos, obteniendo la restitucin de lo que ha dado o pagado, por lo
que se negar lugar a la reivindicacin intentada. Por las anteriores consideraciones, y lo
dispuesto en los artculos 17 y 18 del Cdigo de Procedimiento Civil; y 1468, 1683, 1687 y
1689 del Cdigo Civil, SE REVOCA, en lo apelado, la sentencia de veintitrs de enero de
dos mil nueve, que se lee de fojas 345 a 408, slo en cuanto acogi la demanda
reivindicatoria y, consecuencialmente, orden la cancelacin las inscripciones de dominio
practicadas por el seor Conservador de Bienes Races de Arica, de fojas 2049 N 845
del Registro de Propiedades del ao 2002 y la de fojas 5000 N 2526 del mismo Registro,
y en su lugar se declara que se rechaza la demanda reivindicatoria referida, como
tambin la peticin de cancelacin de las aludidas inscripciones.
REGLA .
a.- El artculo 136 de la Ley General de Urbanismo y Construccin, exige un Certificado
de la Direccin de Obras con el objeto de autorizar la venta y adjudicacin de un precio,
por lo tanto, su inexistencia a la fecha de celebracin del contrato de permuta, imprime a
este ltimo de un vicio cuyo castigo es la nulidad absoluta, por haberse ejecutado en
contravencin con la prohibicin de enajenar establecida por la ley, es decir, por objeto
ilcito.
b.- La parte en la celebracin del contrato de permuta que se pretende anular, se
encuentra imposibilitada de ejercer la accin de nulidad absoluta por objeto ilcito, pues lo
ejecut sabiendo o debiendo saber del vicio que lo invalidaba, defecto que estaba
obligado a conocer a travs de una resolucin que aprob la subdivisin del predio de
mayor cabida que origin el inmueble permutado, y que, en su parte final, expresamente
estableca la prohibicin de transferir el predio sin previamente rendir garanta de
urbanizacin, resolucin que recoge la norma prohibitiva contenida en el artculo 136 de la
Ley General de Urbanismo y Construccin, incluida en el contrato de permuta, y que cada
parte contratante conoca el estado del predio que adquira, como reza su clusula quinta
al sealar "Cada parte declara conocer el estado de la propiedad que adquiere." Es decir
que tal conocimiento no deriva del conocimiento del artculo 136 de la Ley de Urbanismo y
Construccin, que debe ser conocido por todos, segn lo seala el artculo 8 del Cdigo
Civil
Se cumple la excepcin establecida en el artculo 1683 del cdigo civil, cuando la parte ha
concurrido a la celebracin del acto o contrato y ha sabido o debido saber el vicio que
invalida el acto, no pudiendo por tanto alegar la nulidad del mismo. As mismo, si se
conoce o se debi conocer del vicio de nulidad habiendo concurrido al acto o contrato, y
tratndose de un vicio de objeto o causa ilcita, se hace plenamente aplicable lo sealado
291
en el artculo 1468 del Cdigo Civil, no pudiendo repetir lo que se haya dado o pagado por
l. Todo lo anterior no impide el deber del tribunal de declarar de oficio la nulidad absoluta
cuando esta se encuentra de manifiesto en el acto o contrato.
4. CITA DE FUENTE.
C. Arica, 25 junio 2009. M.J. N 20689125
Texto completo de la Sentencia
Corte Arica
Fallo:
Fallo revocado por la Corte Suprema con fecha 11 de noviembre de 2011, causa Rol 5091-2009. Sin
embargo, la Corte Suprema confirm el carcter de objeto ilcito de la venta y adjudicacin.
292
agregado a fojas 80 del expediente criminal Rol N 50.072/02, tenido a la vista, en el que
ha fundado su defensa la parte demandada, afirmando que se tratara del certificado
exigido por la ley, ya que ste fue extendido el 20 de marzo de 2001, es decir, con
posterioridad a la celebracin del contrato de permuta de 27 de febrero de 2001.
TERCERO: Que la parte demandante se encuentra imposibilitada de alegar o deducir la
accin de nulidad absoluta por objeto ilcito, en razn de lo dispuesto en el artculo 1683
del Cdigo Civil, que consagra una excepcin a la regla general de que puede alegar la
nulidad absoluta de un acto o contrato todo el que tenga inters en ello, al disponer
"excepto el que ha ejecutado el acto o celebrado el contrato, sabiendo o debiendo saber
el vicio que la invalidaba".
CUARTO: Que en efecto, concurren en la especie los dos presupuestos que hacen
aplicable la norma citada, cuales son, que la sociedad demandante Hipdromo Arica S.A.,
particip como parte en la celebracin del contrato de permuta que pretende anular, y que
lo ejecut sabiendo o debiendo saber del vicio que lo invalidaba, defecto que estaba
obligado a conocer a travs de la Resolucin N 1922 que aprob la subdivisin del predio
de mayor cabida que origin el inmueble de autos, y que, en su parte final, expresamente
estableca la prohibicin de transferir el predio sin previamente rendir garanta de
urbanizacin, resolucin que recoge la norma prohibitiva contenida en el artculo 136 de la
Ley General de Urbanismo y Construccin, incluida en el contrato de permuta, clusula
segunda, y que cada parte contratante conoca el estado del predio que adquira, como
reza su clusula quinta al sealar "Cada parte declara conocer el estado de la propiedad
que adquiere.". Es decir que tal conocimiento, segn estos sentenciadores, no deriva del
conocimiento del artculo 136 de la Ley de Urbanismo y Construccin, que debe ser
conocido por todos, segn lo seala el artculo 8 del Cdigo Civil que establece que
"Nadie podr alegar ignorancia de la ley despus que sta haya entrado en vigencia.",
sino que de los antecedentes recientemente sealados.
Tal es as, que la demandante conoca la obligacin de contar con el certificado en
cuestin a la fecha de la celebracin del contrato de permuta, que obtuvo el documento
mencionado en el motivo segundo extemporneamente.
QUINTO: Que si bien la actora impetr la cancelacin de las inscripciones de dominio
efectuadas a favor de Ral Tarcicio Acevedo Glvez y de los demandados de
reivindicacin Mauricio Hernando Jaque Lara y Juan Constantino Kukulis Buch, ello
resulta improcedente toda vez que Acevedo Glvez no es parte en este juicio, y no se
dedujo accin de nulidad respecto de los ttulos por los cuales los demandados
mencionados adquirieron el dominio de los predios de que se trata, sino que nicamente
se ejerci la de reivindicacin en contra de ellos respecto de tales inmuebles.
SEXTO: Que en relacin a la accin reivindicatoria, es aplicable en la especie lo dispuesto
en el artculo 1468 del Cdigo Civil, en cuanto "No podr repetirse lo que se haya dado o
pagado por un objeto o causa ilcita a sabiendas". En efecto, y segn se ha razonado en
los motivos precedentes, la demandante se encontraba imposibilitada de alegar la nulidad
por haber tenido conocimiento "al momento de contratar- del defecto que hoy alega; y sin
perjuicio, de declararse esta sancin de oficio, la ley le impide aprovecharse y
beneficiarse de sus efectos, obteniendo la restitucin de lo que ha dado o pagado, por lo
que se negar lugar a la reivindicacin intentada. Por las anteriores consideraciones, y lo
dispuesto en los artculos 17 y 18 del Cdigo de Procedimiento Civil; y 1468 , 1683,
1687 y 1689 del Cdigo Civil, SE REVOCA, en lo apelado, la sentencia de veintitrs de
293
enero de dos mil nueve, que se lee de fojas 345 a 408, slo en cuanto acogi la demanda
reivindicatoria y, consecuencialmente, orden la cancelacin las inscripciones de dominio
practicadas por el seor Conservador de Bienes Races de Arica, de fojas 2049 N 845
del Registro de Propiedades del ao 2002 y la de fojas 5000 N 2526 del mismo Registro,
y en su lugar se declara que se rechaza la demanda reivindicatoria referida, como
tambin la peticin de cancelacin de las aludidas inscripciones.
Se CONFIRMA, en lo dems apelado, el referido fallo, con declaracin que la nulidad
absoluta por adolecer de objeto ilcito el contrato de permuta celebrado mediante escritura
pblica de 27 de febrero de 2001 en la Notara de Arica servida por doa Mara Antonieta
Nio de Zepeda Parra, es declarada de oficio en virtud de lo previsto en el artculo 1683
de Cdigo Civil, y no por haberla impetrado la parte demandante en su demanda de fojas
1 en contra de los demandados Mauricio Hernando Jaque Lara y Juan Constantino
Kukulis Buch.
Regstrese y devulvase, con sus agregados y causa tenida a la vista.
Redaccin de la seora Ministro doa Lidia Villagrn Hormazbal.
Rol N 75-2009-civil.
294
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Causa.
C. Suprema
1., 2. y 3. (S.R).
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
Sentencia de Remplazo
1) Que, de conformidad a la teora general del acto jurdico, uno de los presupuestos de
existencia es su causa, requisito, entre otros de rigor, de cuya realidad y licitud depende la
validez del acto. Ambos aspectos, aparecen recogidos en el cuarto nmero del artculo
1445 y, mirando con mayor especificidad a la obligacin y al contrato, en la norma del
artculo 1467, ambos del Cdigo Civil. Si bien en doctrina se distingue entre causa
eficiente " el antecedente generador del efecto, esto es, la fuente jurdica de la obligacin causa final " fin directo o inmediato y abstracto previsto para el acto en virtud del cual ste
295
se celebra - y causa ocasional " motivacin particular o razn mediata que mueve a las
partes a hacer la declaracin de voluntad -, lo cierto es que la mayora de los autores
opinan que en nuestro ordenamiento prima la segunda de estas clasificaciones que, en
palabras de don Luis Claro Solar, "es el fin o propsito inmediato e invariable de un acto"
(Explicaciones de Derecho Civil Chileno y Comparado. Ed. Jurdica de Chile, Vol. V),
caracterizada como el objetivo invariable en los actos y contratos de la misma especie.
2) Que lo antedicho no quita que haya espacio para considerar, en un cariz subjetivo, los
motivos precisos o particulares de cada acto como informadores de su causa. As se
infiere del anlisis conjunto de las normas de los artculos 1467 y 1560 del Cdigo de
Bello pues, de un lado "se entiende por causa el motivo que induce al acto o contrato",
mientras que el segundo precepto manda la prevalencia de la voluntad real por sobre la
declarada. "Se realiza as una fusin de las ideas subjetivas y objetivas predominantes.
Nuestro Cdigo ha consagrado desde un comienzo las ideas que, no hace muchos aos,
propiciaba el Decano Maury de combinar los puntos de vista objetivos y subjetivos; de
limitar, por la consideracin de elementos objetivos, la bsqueda de la intencin."
(Derecho Civil. Parte General, Carlos Ducci Claro, pg. 311).
3) Que el asunto sub judice, a la luz de todo lo expuesto hasta aqu, lleva a reflexionar
que la convencin bilateral onerosa de la que trata la litis, causada como ha de
entendrsela, lo fue en las obligaciones recprocas de las partes - la asesora legal que
comprometi el letrado a favor de su contraparte, remunerada con el estipendio que esta
ltima deba pagar por ella " e inducida por la finalidad de contar con un servicio legal
especializado de asesora, auxilio y complemento de la gestin de administracin del
Edificio en todo su aspecto jurdico, tal como se lee en la primera clusula del contrato
allegado a los autos. De all que, pretender que los servicios del abogado asesor sigan
requirindose y prestndose en el tiempo posterior a que la comunidad fuera llevada a
juicio por el profesional a quien haba confiado la asesora legal en sus actividades,
carece de la necesaria lgica que subyace a la movilizacin de la voluntad de los
contratantes.
REGLA .
296
a.- En conformidad a la teora general del acto jurdico uno de los presupuestos de
existencia es su causa, requisito, entre otros de rigor, de cuya realidad y licitud depende la
validez del acto. Ambos aspectos aparecen recogidos en el N4 del artculo 1445 del
Cdigo Civil y mirando con mayor especificidad a la obligacin y al contrato en la norma
del artculo 1467 del mismo cdigo. Si bien en doctrina se distingue entre causa eficiente "
el antecedente generador del efecto, esto es, la fuente jurdica de la obligacin - causa
final " fin directo o inmediato y abstracto previsto para el acto en virtud del cual ste se
celebra - y causa ocasional " motivacin particular o razn mediata que mueve a las
partes a hacer la declaracin de voluntad -, lo cierto es que la mayora de los autores
opinan que en nuestro ordenamiento prima la segunda de estas clasificaciones que, en
palabras de don Luis Claro Solar, "es el fin o propsito inmediato e invariable de un acto"
(Explicaciones de Derecho Civil Chileno y Comparado. Ed. Jurdica de Chile, Vol. V),
caracterizada como el objetivo invariable en los actos y contratos de la misma especie.
b.- Hay espacio para considerar, en un cariz subjetivo, los motivos precisos o particulares
de cada acto como informadores de su causa. As se infiere del anlisis conjunto de las
normas de los artculos 1467 y 1560, pues, de un lado "se entiende por causa el motivo
que induce al acto o contrato", mientras que el segundo precepto manda la prevalencia de
la voluntad real por sobre la declarada. "Se realiza as una fusin de las ideas subjetivas y
objetivas predominantes. Nuestro Cdigo ha consagrado desde un comienzo las ideas
que, no hace muchos aos, propiciaba el Decano Maury de combinar los puntos de vista
objetivos y subjetivos; de limitar, por la consideracin de elementos objetivos, la bsqueda
de la intencin." (Derecho Civil. Parte General, Carlos Ducci Claro, pg. 311).
4. CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 24 Junio 2010. M.J. N 24298
297
VISTOS:
En estos autos Rol N 5.919-2005.- del Vigsimo Primer Juzgado Civil de Santiago
seguidos en juicio sumario de cobro de honorarios, don Jos Manuel Figueroa Valds
dedujo demanda en contra de Comunidad Edificio Plaza de Armas.
Apelado este fallo por la demandada, una de las Salas de la Corte de Apelaciones de
Santiago, en sentencia de doce de noviembre de dos mil ocho, escrita a fojas 101, lo
confirm.
298
CONSIDERANDO:
TERCERO: Que, revisando los asertos del demandante al incoar la accin declarativa de
cobro de autos, se observa que, tras describir las estipulaciones de la convencin que le
sirve de basamento, se dedica a puntualizar cada perodo de asesora legal no
remunerado, comprendiendo las mensualidades de julio de 2004 a mayo de 2005, ambas
inclusive, todas previas a la interposicin de la demanda respectiva, para luego, en el
acpite del petitorio impetrar el pago de todas ellas "y los honorarios que se devenguen
durante la tramitacin del juicio", sin que esta ltima peticin haya sido desarrollada en
cuanto a sus fundamentos de hecho y de derecho, salvo por el argumento de la vigencia
del contrato de asesora, al que el actor aduce no se ha puesto trmino en la forma
dispuesta en el mismo.
QUINTO: Que, de conformidad con lo dispuesto en el cuarto numeral del artculo 170 del
Cdigo de Procedimiento Civil, las sentencias definitivas de primera o de nica instancia y
las de segunda que modifiquen o revoquen en su parte dispositiva las de otros tribunales,
contendrn las consideraciones de hecho y de derecho que le sirven de fundamento.
SEXTO: Que del anlisis de los antecedentes, como ya se adelantara, se advierte que los
sentenciadores han hecho lugar a la pretensin de pago de los honorarios demandados,
entendiendo que, demostrada la existencia de la convencin, la demandada no ejerci la
carga procesal de comprobar en autos el haber cumplido con la obligacin de pago de los
honorarios correlativos detallados en el libelo pretensor; sin embargo, resolvieron
abarcando en el perodo de clculo de los mismos el tiempo que corre desde la
presentacin de la demanda hasta la fecha del fallo y, si bien, con esto ltimo se atuvieron
al marco petitorio de la demanda, no es menos cierto que, as como el actor no
proporcion antecedentes para respaldar su solicitud en tal sentido, los jueces del fondo
tampoco apoyaron su disposicin en fundamento alguno, lo que claramente era de rigor,
debido a que, tratndose de una convencin que involucraba la prestacin de servicios
inmateriales en la forma de otorgar asesora con los conocimientos profesionales del
abogado que ahora demanda, se haca necesario discurrir acerca de la razn que
sustentaba la generacin de honorarios a favor del mismo profesional que vena
demandando a la entidad a quien deba proporcionar servicios legales, coetneamente a
la substanciacin del pleito; aspecto que resultaba determinante respecto a la pretensin
de pago impetrada por la demandada.
SPTIMO: Que lo anterior se traduce en que en la sentencia de los jueces del fondo han
faltado las consideraciones de hecho y derecho que, necesariamente, deban servirle de
fundamento, atendida la naturaleza del asunto sometido a su decisin. Tal omisin
constituye la causal de nulidad formal prevista en el artculo 768 N 5 del Cdigo de
Procedimiento Civil, en relacin con lo dispuesto en el cuarto nmero del artculo 170 del
300
mismo cuerpo de leyes, la cual por tener influencia substancial en lo dispositivo del fallo
se hace indispensable corregir, ejerciendo las facultades que le permiten a esta Corte
actuar de oficio.
Y de conformidad, adems, con lo dispuesto en las normas legales y en los artculos 766,
768, 775 y 806 del Cdigo de Procedimiento Civil, se casa en la forma de oficio y en
consecuencia se invalida la sentencia de ocho de octubre de dos mil ocho, escrita a fojas
129, la que se reemplaza por la que se dicta acto continuo, sin nueva vista y en forma
separada.
Regstrese.
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sres. Adalis
Oyarzn M., Sergio Muoz G., Sra. Margarita Herreros M., Sr. Juan Araya E. y Abogado
Integrante Sr. Jorge Medina C.
No firma el Abogado Integrante Sr. Medina, no obstante haber concurrido a la vista del
recurso y acuerdo del fallo, por estar ausente.
301
En Santiago, a veinticuatro de junio de dos mil diez, notifiqu en Secretara por el Estado
Diario la resolucin precedente.
SENTENCIA DE REEMPLAZO
VISTOS:
Con el mrito de las razones contenidas en el motivo sexto del fallo de casacin que
antecede, las que se tienen por reproducidas,
1) Que, de conformidad a la teora general del acto jurdico, uno de los presupuestos de
existencia es su causa, requisito, entre otros de rigor, de cuya realidad y licitud depende la
validez del acto. Ambos aspectos, aparecen recogidos en el cuarto nmero del artculo
1445 y, mirando con mayor especificidad a la obligacin y al contrato, en la norma del
artculo 1467, ambos del Cdigo Civil. Si bien en doctrina se distingue entre causa
eficiente " el antecedente generador del efecto, esto es, la fuente jurdica de la obligacin causa final " fin directo o inmediato y abstracto previsto para el acto en virtud del cual ste
se celebra - y causa ocasional " motivacin particular o razn mediata que mueve a las
partes a hacer la declaracin de voluntad -, lo cierto es que la mayora de los autores
opinan que en nuestro ordenamiento prima la segunda de estas clasificaciones que, en
palabras de don Luis Claro Solar, "es el fin o propsito inmediato e invariable de un acto"
(Explicaciones de Derecho Civil Chileno y Comparado. Ed. Jurdica de Chile, Vol. V),
caracterizada como el objetivo invariable en los actos y contratos de la misma especie.
302
2) Que lo antedicho no quita que haya espacio para considerar, en un cariz subjetivo, los
motivos precisos o particulares de cada acto como informadores de su causa. As se
infiere del anlisis conjunto de las normas de los artculos 1467 y 1560 del Cdigo de
Bello pues, de un lado "se entiende por causa el motivo que induce al acto o contrato",
mientras que el segundo precepto manda la prevalencia de la voluntad real por sobre la
declarada. "Se realiza as una fusin de las ideas subjetivas y objetivas predominantes.
Nuestro Cdigo ha consagrado desde un comienzo las ideas que, no hace muchos aos,
propiciaba el Decano Maury de combinar los puntos de vista objetivos y subjetivos; de
limitar, por la consideracin de elementos objetivos, la bsqueda de la intencin."
(Derecho Civil. Parte General, Carlos Ducci Claro, pg. 311).
3) Que el asunto sub judice, a la luz de todo lo expuesto hasta aqu, lleva a reflexionar
que la convencin bilateral onerosa de la que trata la litis, causada como ha de
entendrsela, lo fue en las obligaciones recprocas de las partes - la asesora legal que
comprometi el letrado a favor de su contraparte, remunerada con el estipendio que esta
ltima deba pagar por ella " e inducida por la finalidad de contar con un servicio legal
especializado de asesora, auxilio y complemento de la gestin de administracin del
Edificio en todo su aspecto jurdico, tal como se lee en la primera clusula del contrato
allegado a los autos. De all que, pretender que los servicios del abogado asesor sigan
requirindose y prestndose en el tiempo posterior a que la comunidad fuera llevada a
juicio por el profesional a quien haba confiado la asesora legal en sus actividades,
carece de la necesaria lgica que subyace a la movilizacin de la voluntad de los
contratantes.
5) Que lo expuesto lleva a concluir que la demanda interpuesta por don Jos Miguel
Figueroa Valds no puede prosperar en cuanto por ella se persigue la declaracin del
deber de la contraria de pagarle emolumentos en el perodo que sigue a la iniciacin del
juicio.
N 639-09.-.
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sres. Adalis
Oyarzn M., Sergio Muoz G., Sra. Margarita Herreros M., Sr. Juan Araya E. y Abogado
Integrante Sr. Jorge Medina C.
No firma el Abogado Integrante Sr. Medina, no obstante haber concurrido a la vista del
recurso yacuerdo del fallo, por estar ausente.
En Santiago, a veinticuatro de junio de dos mil diez, notifiqu en Secretara por el Estado
Diario la resolucin precedente
304
305
Tribunal
C. Suprema
C. Suprema
Disidente)
C. Suprema
Disidente)
Considerando
7 y 8.
(Voto 4., 6. Y 10.
(Voto 11.
los actores son poseedores inscritos del inmueble cuya reivindicacin se demanda,
resultando un hecho pacfico que el demandado ocupa el referido inmueble y que ste se
encuentra debidamente singularizado, corresponda -tal como lo hicieron los jueces del
grado- acoger la accin de que se trata, resultando por ende improcedentes los
argumentos destinados a sustentar la existencia de una obligacin natural para enervar la
accin reivindicatoria.
Voto Disidente
4.- Que al deducirse la accin reivindicatoria y oponerse a la demandada la excepcin
perentoria sustentada en un hecho que impide la aceptacin de la pretensin del actor o
que a lo menos modifica la situacin jurdica por aquella invocada; excepcin que tiene su
sustento en la aplicacin de la norma legal del artculo 1470 del Cdigo Civil, que debe
ser resuelta con anterioridad a la demanda, puesto que su acogimiento lleva al rechazo de
la accin, debi ser analizada y resuelta de esta forma, por lo que, al omitir
pronunciamiento a su respecto por parte de los jueces de la instancia, argumentando que
los antecedentes de la excepcin correspondan ser invocados como accin en un juicio
diverso, han incurrido, por este solo hecho en infraccin de ley, en este caso de la norma
precisada, la que han omitido ponderar debiendo hacerlo, pues estaba llamada en forma
previa a decidir respecto de la aceptacin de la demanda.
6.- Que el demandado ha expresado que la obligacin que se desprende del titulo que
esgrime es de carcter natural, pues la accin destinada a exigir su cumplimiento se
extingui por prescripcin, encontrndose en la hiptesis del N 2 del artculo 1470 del
Cdigo Civil. En efecto, las obligaciones de la vendedora fueron generadas en carcter de
civil, transformndola en natural el transcurso del tiempo necesario para que opere la
prescripcin extintiva de la accin de la cual es titular el comprador, en calidad de
acreedor. Se trata de una obligacin que naci civil, pudo ser exigido su total
cumplimiento y no se hizo, por lo que ya se carece de accin para declamarla.
Los efectos de las obligaciones civiles se clasifican en cuanto a su cumplimiento y su
incumplimiento. Respecto de las obligaciones naturales sus efectos, constituidos por los
hechos jurdicos que ellas justifican, se le agrupan y se sealan los siguientes: "a)
autorizan para retener lo dado o pagado en razn de ellas (soluti retentio, retener el
pago); b) admiten novacin; c) pueden servir de base para una caucin, y d) no admiten
que se les entienda la cosa juzgada de la obligacin civil". No todas ellas presentan las
mismas caractersticas, "salvo la que es de su esencia y que genricamente las definen, o
sea, el de ser obligaciones que no confieren derecho para exigir su cumplimiento, pero
que, cumplidas, autorizan para retener lo que se ha dado o pagado en razn de ellas." "La
pauta general sera la de que cada obligacin natural no produce sino los efectos que no
son incompatibles con el motivo que ha determinado al legislador a negarles carcter civil"
(Arturo Alessandri Rodrguez, Manuel Somarriva Undurraga y Antonio Vodanovic H.,
Tratado de las Obligaciones, Volumen I, Editorial Jurdica de Chile, ao 2001, pgina 92).
El derecho a retener lo pagado es el efecto comn a las obligaciones naturales. "La
obligacin natural es causa que justifica el pago", por ello no se puede repetir lo pagado
con motivo de una obligacin natural (artculos 1470 y 2296 del Cdigo Civil), pero
procede repetir lo pagado con motivo de un error de derecho, cuando el pago no tena por
fundamento ni aun una obligacin puramente natural (artculo 2297 del Cdigo Civil)
(Alessandri y otros, obra citada, pgina 93). En efecto, "la obligacin natural no confiere al
acreedor derecho para exigir su cumplimiento; no le da accin; le da nicamente aquella
excepcin para rechazar la demanda de repeticin que el deudor le promoviera despus
307
de haberle pagado lo que slo naturalmente de deba. (Luis Claro Solar, Explicaciones de
Derecho Civil Chileno y Comparado, Imprenta Nascimiento, ao 1939, Tomo X, pgina
57).
En definitiva, "lo mismo que la obligacin civil, la obligacin natural es un vnculo jurdico
entre el deudor y el acreedor que impone a aqul una prestacin a favor de ste, que
debe ejecutar para dar cumplimiento a la palabra empeada en la convencin de que
procede la obligacin natural" (Claro Solar, obra citada, pgina 57).
10.- Que al haberse hecho entrega material del bien raz al demandado, por parte de la
antecesora en el dominio de los actores, el comprador Enzo David Seplveda Valenzuela,
cobra aplicacin la norma del artculo 1470 del Cdigo Civil, en cuanto, si bien no puede
exigir el cumplimiento a los herederos de doa Mara Luisa Jorquera Jorquera, su
vendedora, dicho cumplimiento parcial le faculta para retener lo que se le ha entregado.
Dicho cumplimiento parcial constituye un pago tambin parcial, pago realizado en su
carcter de obligacin civil que devino o se transform en natural por el paso del tiempo,
que es precisamente la situacin del N 2 del artculo en referencia. Esta es la
transgresin denunciada por el recurso de casacin en el fondo, de forma tal que ha
debido acogerse la excepcin perentoria interpuesta, decisin que trae aparejada, por va
consecuencial, el rechazo de la demanda, de manera que no resulta totalmente
procedente negar la tutela de esta Corte de Casacin por haber omitido denunciar como
infringidas las normas relativas a la accin reivindicatoria.
11.- Que la conclusin anterior se impone igualmente mediante una interpretacin
armnica de las distintas disposiciones que reglan la materia, tanto las que permiten
retener (artculos 1470 y 2296 del Cdigo Civil), como las que impiden repetir lo pagado o
cumplido parcialmente ( artculos 1470 inciso final y 2297 del Cdigo Civil), pero, adems,
acudiendo al artculo 1817 del cuerpo de normas en referencia, que expresa: "Si alguien
vende separadamente una misma cosa a dos personas, el comprador que haya entrado
en posesin ser preferido al otro; si ha hecho entrega a dos, aquel a quien se haya
hecho primero ser preferido; si no se ha entregado a ninguno, el ttulo ms antiguo
prevalecer", de forma tal que si se ha hecho la entrega material al comprador, esta
entrega prefiere a cualquier derecho que pueda reclamar el vendedor, puesto que es lo
que impone la buena fe. Se da el absurdo que cuando los actores procedan a vender el
bien raz caern precisamente en el ltimo supuesto de la norma, caso en el cual deber
preferirse en sus derechos al demandado de autos, pue s tiene el ttulo ms antiguo.
REGLA.
a.- De conformidad a lo prevenido en el artculo 728 del Cdigo Civil, la posesin inscrita
se conserva mientras subsista la inscripcin y se pierde slo por la cancelacin de la
misma, entendiendo que ello ocurre nicamente por voluntad de las partes; por una nueva
inscripcin en que el poseedor inscrito transfiere su derecho a otro; y por decreto judicial.
Habindose establecido como hecho de la causa que los actores son poseedores
inscritos del inmueble cuya reivindicacin se demanda, resultando un hecho pacfico que
el demandado ocupa el referido inmueble y que ste se encuentra debidamente
singularizado, corresponda -tal como lo hicieron los jueces del grado- acoger la accin de
que se trata, resultando por ende improcedentes los argumentos destinados a sustentar la
existencia de una obligacin natural para enervar la accin reivindicatoria.
Voto Disidente
308
a.- De una obligacin natural nace una excepcin perentoria basada en un hecho positivo
destinada a impedir la aceptacin de lo pretendido por el actor o que a lo menos modifica
la situacin jurdica por aquella invocada.
.
b.- El hecho de haberse celebrado una compraventa sobre inmueble por escritura pblica
en que el comprador cumple con su obligacin y el vendedor solo cumple parcialmente,
otorgando la entrega material sin realizar la debida inscripcin para otorgar la posesin
legal, y habiendo prescrito la accin del comprador para exigir el cumplimiento o
resolucin, nos encontramos en el caso de una obligacin natural que permite al
comprador retener el inmueble de acuerdo al nmero 2 del artculo 1470 del cdigo civil.
c.- La buena fe impone, de acuerdo a lo sealado en el artculo 1817 del cdigo civil, que
ante la entrega de la cosa a un comprador, esta entrega prefiere a cualquier derecho que
pueda reclamar el vendedor. En la especie, se trataba de la accin reivindicatoria de los
herederos de la vendedora quien haba realizado la entrega material del inmueble, pero
no haba procedido a la inscripcin, al haber fallecido antes de poder hacerlo.
4. CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 21 julio 2009. M.J. N 20604.
Texto completo de la Sentencia
Corte Suprema
Fallo:
309
CONSIDERANDO:
PRIMERO: Que en el recurso de casacin en el fondo el recurrente denuncia infringido el
artculo 1470 inciso 3 del Cdigo Civil, al sealarse por los jueces del grado que dicha
alegacin debe efectuarse mediante el ejercicio de una accin judicial.
Refiere que su alegacin tuvo por objeto destruir el fundamento de la pretensin y que de
haberse entendido que la mencionada excepcin opuesta poda y deba serlo como se
hizo, la resolucin del fallo, analizando la prueba aportada por su parte, habra sido
rechazar la demanda.
SEGUNDO: Que, previo al anlisis de los argumentos del recurso es menester consignar
los siguientes antecedentes del proceso: a) don Arturo Mrquez Gallardo en
representacin de don Jaime Augusto y Ral Ren Arratia Rojas y de doa Vernica del
Carmen Arratia Jorquera, deduce accin reivindicatoria en contra de don Enzo David
Seplveda Valenzuela a fin de que sea condenado a restituirles el inmueble, respecto del
cual sus representados son dueos en comn y pro indiviso y que se encuentra ubicado
en Villa Alemana, sector Quebrada Escobares, segn plano de agrupacin Huerto obreros
"El Patagual", terreno individualizado como anexo N 13-J del plano archivado bajo el N
227 en el Registro de Documentos del ao 1976 del Conservador de Bienes Races de
Villa Alemana. Lo adquirieron por sucesin por causa de muerte, de la herencia intestada
de doa Vernica del Carmen Arratia Jonquera y de la herencia testada quedada al
fallecimiento de don Ral Ren Arratia Palma, lo que consta de las inscripciones
especiales de herencia que rolan inscrita a fojas 628 vta. N 1065 y a fojas 872 vta. N
1410 del Registro de Propiedad del Conservador de Bienes Races de Villa Alemana,
correspondiente a los aos 1990 y 1996, respectivamente.
Aaden que el demandado ocupa la parcela que reivindican, pretendindose dueo y
poseedor del bien raz.
b) el demandado al contestar la demanda seal, que ocupa el inmueble en virtud de un
contrato de compraventa celebrado por escritura pblica de 9 de junio de 1989 con doa
Mara Luisa Jorquera Jorquera, el que no pudo ser inscrito por que el inmueble no haba
sido oportunamente regularizado.
Refiere que la obligacin del vendedor es transferir el bien y que al prescribir la accin la
obligacin se transforma de civil a natural, por lo que estima que se encuentra facultado a
retener precisamente lo que ha recibido en virtud de una obligacin del vendedor que
ahora es natural.
TERCERO: Que los jueces del grado establecieron que los actores adquirieron la
propiedad por sucesin por causa de muerte y se tuvo por acreditado el dominio de los
actores sobre el bien raz reclamado. En relacin a la excepcin opuesta, sobre existencia
de una obligacin natural, sostuvieron que la alegacin del demandado debe efectuarse
mediante el ejercicio de una accin judicial, razn por la cual la rechazaron.
CUARTO: Que en este contexto, las situaciones de derecho estn circunscritas a lo que
dispone el legislador en los artculos 889 del Cdigo Civil, en orden a que "la
reivindicacin o accin de dominio es la que tiene el dueo de una cosa singular, de que
no est en posesin, para que el poseedor de ella sea condenado a restitursela" y
724 del mismo cuerpo normativo, el que establece "si la cosa es de aquellas cuya
310
tradicin deba hacerse por inscripcin en el Registro del Conservador, nadie podr
adquirir la posesin de ella sino por este medio".
En virtud de lo expuesto previamente, cabe destacar que la sentencia objeto del recurso
en estudio, para acoger la tesis esgrimida por el demandante, en cuanto a la procedencia
de la accin reivindicatoria impetrada en autos, y para desestimar la accin y excepcin
opuesta por la contraria, se sustenta, en esencia, en lo previsto en el citado artculo 889
del Cdigo Civil, dando por establecida la concurrencia, en el caso en particular, de los
presupuestos fcticos de procedencia de la accin reivindicatoria;
QUINTO: Que ahora bien, de lo que se ha sealado queda en evidencia que el recurso en
estudio no ha pretendido, como debi hacerlo, que la sentencia que impugna haya
incurrido en errores de derecho por infraccin a la preceptiva legal sealada en el motivo
anterior, la cual constituye, como se ha visto, fundamento jurdico para resolver la
controversia en la forma que lo hizo, la cual no se ha denunciado como vulnerada. De lo
dicho se sigue que siendo la casacin de fondo un recurso de derecho estricto, en el cual
deben expresarse en qu consisten los errores de derecho de que adolece el fallo
recurrido y de qu modo esos errores de derecho o infracciones de ley influyen
sustancialmente en lo dispositivo de la sentencia -artculos 767 y 772 del Cdigo de
Procedimiento Civil-, esta Corte Suprema se encuentra impedida de entrar a pronunciarse
acerca de si la sentencia recurrida aplic acertadamente o no la preceptiva decisoria litis
comentada, cuya vulneracin el recurso no invoca, lo que lleva a concluir que este recurso
no puede prosperar;
SEXTO: Que en razn de lo reseado, debe manifestarse que la alegacin que se orienta
a refutar la falta de aplicacin del artculo 1470 del Cdigo Civil al caso sub lite, no puede
servir en este caso de base al recurso de casacin en el fondo, siendo condicin
fundamental del arbitrio en estudio que la infraccin invocada influya sustancialmente en
lo dispositivo del fallo, exigencia que, a la luz del razonamiento anterior, no se advierte en
la especie, puesto que incluso prescindiendo de la exgesis y aplicacin otorgada por los
jueces del mrito a las citadas normas, los sentenciadores tuvieron "en uso de sus
facultades soberanas-por establecida la concurrencia de los supuestos fcticos de
procedencia de la accin principal.
SEPTIMO: Que slo a mayor abundamiento, resulta pertinente puntualizar que para
adquirir la posesin regular de un inmueble inscrito, cuando se invoca un ttulo translaticio
de dominio, es indispensable la inscripcin, ya que esa es la nica forma de hacer la
tradicin de los inmuebles, salvo las servidumbres; siendo en este caso la tradicin un
requisito indispensable de la posesin regular. Respecto de la posesin irregular de un
inmueble inscrito "algunos autores estiman que sin la inscripcin no se puede adquirir ni
an la posesin irregular de los inmuebles no inscritos, ya que el artculo 724 establece
que si la cosa es de aquellas cuya tradicin deba hacerse por la inscripcin en el registro
del conservador, nadie puede adquirir posesin de ella sino por este medio, no
distinguiendo el referido artculo entre posesin regular e irregular. Para ellos, tratndose
de inmuebles, la inscripcin es un requisito para la posesin sin distinciones." (Fernando
Rozas Vial, "Derecho Civil", Los Bienes, Editorial Universitaria, 1984, pagina 241).
En todo caso, debe subrayarse que, de conformidad a lo prevenido en el artculo 728 del
Cdigo Civil, la posesin inscrita se conserva mientras subsista la inscripcin y se pierde
slo por la cancelacin de la misma, entendiendo que ello ocurre nicamente por voluntad
de las partes; por una nueva inscripcin en que el poseedor inscrito transfiere su derecho
311
negacin de los hechos y/o el derecho en que sostiene el actor su demanda, sin agregar
ningn antecedente nuevo que, sirvindole de causa de pedir, la justifique. Pero tambin
la integra aquellas que consisten en la afirmacin de un hecho positivo y/o una alegacin
jurdica, que importa una causa de pedir de tal naturaleza, que destruye, neutraliza,
extingue o anula los fundamentos mismos de la pretensin del actor, en trminos tales
que desvirta e impide que la demanda pueda prosperar, debiendo el juez declararla
infundada.
La doctrina expresa que hay que distinguir entre las exceptio facti y exceptio jure. Para
justificarlas se expresa: "Todo derecho nace, se transforma o se extingue como
consecuencia de un hecho, y las distintas situaciones jurdicas derivan, as de la
naturaleza de los hechos. Estos pueden ser de tres clases: 1 Hechos constitutivos, que
dan nacimiento a una relacin jurdica y que, a su vez, se distinguen en voluntarios o
involuntarios, lcitos e ilcitos, etc.; 2 Hechos impeditivos, que no obstante existir el hecho
constitutivo, importan un obstculo al nacimiento de una relacin jurdica; 3 Hechos
extintivos, que ponen fin a la relacin jurdica" (Alsina, citado por Avsolomovich y otros,
Nociones de Derecho Procesal, pgina 192), a lo cual se han agregado los hechos
modificatorios, que alteran o transforman una situacin jurdica determinada.
La caracterstica fundamental de tales excepciones se encuentra en el hecho que procede
su resolucin de manera previa, puesto que su acogimiento determina el rechazo de la
demanda y, slo en el evento que sea rechazada, podr emitirse decisin sobre la accin
interpuesta.
4.- Que al deducirse la accin reivindicatoria y oponerse a la demandada la excepcin
perentoria sustentada en un hecho que impide la aceptacin de la pretensin del actor o
que a lo menos modifica la situacin jurdica por aquella invocada; excepcin que tiene su
sustento en la aplicacin de la norma legal del artculo 1470 del Cdigo Civil, que debe
ser resuelta con anterioridad a la demanda, puesto que su acogimiento lleva al rechazo de
la accin, debi ser analizada y resuelta de esta forma, por lo que, al omitir
pronunciamiento a su respecto por parte de los jueces de la instancia, argumentando que
los antecedentes de la excepcin correspondan ser invocados como accin en un juicio
diverso, han incurrido, por este solo hecho en infraccin de ley, en este caso de la norma
precisada, la que han omitido ponderar debiendo hacerlo, pues estaba llamada en forma
previa a decidir respecto de la aceptacin de la demanda. 5.- Que de doa Mara Luisa
Jorquera Jorquera, es antecesora en el dominio reclamado por los actores, en calidad de
herederos y es la vendedora en la escritura pblica por la que se celebr el contrato de
compraventa esgrimido por el demandado, en calidad de comprador. En efecto, es la
madre de Vernica del Carmen Arratia Jorquera y cnyuge de Ral Ren Arratia Palma,
padre de Jaime Augusto y Ral Ren Arratia Rojas. Igualmente es quien celebra como
vendedora el contrato de compraventa con el demandado. Lo anterior identifica a Mara
Luisa Jorquera Jorquera con los actores de autos, puesto que, en su carcter de
herederos, han pasado a ocupar el lugar de aqulla en el contrato celebrado con el
demandado.
"Son partes en un contrato aquellos que concurren a la celebracin, personalmente o
representados (legal o convencionalmente), pero tambin son partes, por regla general, y
desde el instante del fallecimiento de los contratantes, los herederos o causahabientes a
ttulo universal, ya que representan a los contratantes, segn la expresin del artculo
1097 del C. Civil, para sucederles en todos los derechos y obligaciones transmisibles. Los
herederos se asimilan a las partes ocupando, a la muerte de stas, la misma situacin
313
jurdica que el causante; de ah que sea un lugar comn sealar que quien contrata para
s, lo hace tambin para sus herederos" (Jorge Lpez Santa Mara, Los Contratos, Parte
General, Tomo II, Editorial Jurdica de Chile, ao 2005, pgina 344).
6.- Que el demandado ha expresado que la obligacin que se desprende del titulo que
esgrime es de carcter natural, pues la accin destinada a exigir su cumplimiento se
extingui por prescripcin, encontrndose en la hiptesis del N 2 del artculo 1470 del
Cdigo Civil. En efecto, las obligaciones de la vendedora fueron generadas en carcter de
civil, transformndola en natural el transcurso del tiempo necesario para que opere la
prescripcin extintiva de la accin de la cual es titular el comprador, en calidad de
acreedor. Se trata de una obligacin que naci civil, pudo ser exigido su total
cumplimiento y no se hizo, por lo que ya se carece de accin para declamarla.
Los efectos de las obligaciones civiles se clasifican en cuanto a su cumplimiento y su
incumplimiento. Respecto de las obligaciones naturales sus efectos, constituidos por los
hechos jurdicos que ellas justifican, se le agrupan y se sealan los siguientes: "a)
autorizan para retener lo dado o pagado en razn de ellas (soluti retentio, retener el
pago); b) admiten novacin; c) pueden servir de base para una caucin, y d) no admiten
que se les entienda la cosa juzgada de la obligacin civil". No todas ellas presentan las
mismas caractersticas, "salvo la que es de su esencia y que genricamente las definen, o
sea, el de ser obligaciones que no confieren derecho para exigir su cumplimiento, pero
que, cumplidas, autorizan para retener lo que se ha dado o pagado en razn de ellas." "La
pauta general sera la de que cada obligacin natural no produce sino los efectos que no
son incompatibles con el motivo que ha determinado al legislador a negarles carcter civil"
(Arturo Alessandri Rodrguez, Manuel Somarriva Undurraga y Antonio Vodanovic H.,
Tratado de las Obligaciones, Volumen I, Editorial Jurdica de Chile, ao 2001, pgina 92).
El derecho a retener lo pagado es el efecto comn a las obligaciones naturales. "La
obligacin natural es causa que justifica el pago", por ello no se puede repetir lo pagado
con motivo de una obligacin natural (artculos 1470 y 2296 del Cdigo Civil), pero
procede repetir lo pagado con motivo de un error de derecho, cuando el pago no tena por
fundamento ni aun una obligacin puramente natural (artculo 2297 del Cdigo Civil)
(Alessandri y otros, obra citada, pgina 93). En efecto, "la obligacin natural no confiere al
acreedor derecho para exigir su cumplimiento; no le da accin; le da nicamente aquella
excepcin para rechazar la demanda de repeticin que el deudor le promoviera despus
de haberle pagado lo que slo naturalmente de deba. (Luis Claro Solar, Explicaciones de
Derecho Civil Chileno y Comparado, Imprenta Nascimiento, ao 1939, Tomo X, pgina
57).
En definitiva, "lo mismo que la obligacin civil, la obligacin natural es un vnculo jurdico
entre el deudor y el acreedor que impone a aqul una prestacin a favor de ste, que
debe ejecutar para dar cumplimiento a la palabra empeada en la convencin de que
procede la obligacin natural" (Claro Solar, obra citada, pgina 57).
7.- Que segn se ha dicho, en el caso sub judice, por escritura pblica de compraventa
de 9 de junio de 1989, celebrada entre doa Mara Luisa Jorquera Jonquera "antecesora
en el dominio del inmueble que se reivindica" como vendedora y don Enzo David
Seplveda, demandado y doa Mara Teresa Boggioni Saavedra, estos dos ltimos como
compradores, celebraron un contrato de compraventa respecto del inmueble ubicado en la
comuna de Villa Alemana, Quebrada Escobares, que corresponde al Lote o Huerto
nmero trece del Plano de agrupacin de Huertos Obreros "El Patagual" , segn el plano
314
316
317
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Mora
C. Suprema
8 y 9.
Pago de intereses
C. Suprema
6, 7, 8 y 9, 10 y 11.
Reajustabilidad
C. Suprema
6 y 12.
Lucro cesante
C. Suprema
Sent. de reemplazo 3
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
SEXTO: Que al efecto resulta procedente tener presente que la avaluacin de perjuicios
consiste en determinar el valor del dinero que corresponde asignar a stos, toda vez que,
por regla general, la obligacin de indemnizar tiene por objeto dar dinero. Esta avaluacin
la pueden hacer las partes, el juez o la ley. De manera tal que la sentencia, si ha habido
una avaluacin convencional, va a condenar a pagar la indemnizacin establecida por las
partes; en cambio, sino existe tal avaluacin corresponde aplicar la legal, caso en el cual
el juez dispondr el monto que resulte de aqulla y, en subsidio, es decir a falta de las dos
anteriores, el juez condenar a pagar el monto que determine de acuerdo a las normas
318
que rigen la indemnizacin de perjuicios, como es el artculo 1556 del Cdigo Civil.
A la avaluacin legal de perjuicios se refiere el artculo 1559 del citado cuerpo legal, cuyo
inciso primero seala: Si la obligacin es de pagar una cantidad de dinero, la
indemnizacin de perjuicios por la mora est sujeta a las reglas siguientes. A
continuacin, la regla primera estatuye: Se siguen debiendo los intereses
convencionales, si se ha pactado un inters superior al legal, o empezaran a deberse los
intereses legales, en el caso contrario, quedando sin embargo en su fuerza las
disposiciones especiales que autoricen el cobro de intereses corrientes en ciertos casos.
De acuerdo a esta norma la avaluacin legal se limita a las obligaciones de dinero toda
vez que: En estas obligaciones el perjuicio por el incumplimiento es evidente, dados los
mltiples usos que el dinero tiene, cuando menos el dinero es generador de intereses y
por esto que el legislador, al reglamentar la indemnizacin, la ha traducido en el pago de
ellos al acreedor. (Las Obligaciones, Ren Abeliuk M. pag. 269).
Los intereses son, pues, la renta que produce un capital. El dinero por su gran
empleabilidad normalmente produce una utilidad; la mnima utilidad o beneficio que puede
otorgar un capital sus intereses. (Obra cit. Pgina 259).
A su vez la ley avala los perjuicios que presume sufre el acreedor por el solo hecho de
que el deudor se constituye en mora, presuncin que justifica, por lo mismo, que el
acreedor no se encuentra obligado a probarlos por otro medio.
especial para regular los efectos del incumplimiento de las obligaciones pecuniarias. De
acuerdo con l, acreditado el retardo del deudor, el monto de la indemnizacin se
determina con una operacin aritmtica, en funcin de la cantidad adeudada, la duracin
de la mora y la correspondiente tasa de inters moratorio. Este sistema se aparta de los
principios que gobiernan el incumplimiento de las obligaciones en general, que imponen al
acreedor la carga de probar la especie y monto de los perjuicios, y ordena que la
indemnizacin se determine conforme a la real extensin de los daos resarcibles sufridos
en el caso concreto. El sistema compensatorio de excepcin a que se alude, justificase
diversas razones. La primera sera en la naturaleza fructfera del dinero que lleva a tener
por cierto sin necesidad de prueba directa- el dao que causa su privacin ilegtima an
la temporal. La segunda razn est en las necesidades del trfico inconciliables con las
dificultades ordinarias inherentes a la prueba de la especie y monto de los daos, agrava
cuando consisten en la falta de dinero, identificables con la de los mltiples usos y
provechos que depara a su tenedor. El sistema compensatorio excepcional se justifica, en
fin, porque existe la posibilidad objetiva de regular equitativamente la indemnizacin en
una tasa de inters, supuesto que las tasas se fije razonablemente teniendo en cuenta,
ora los frutos que los capitales producen normalmente y de los que el acreedor habra
sido ilegtimamente privado, ora el costo en que habra incurrido, de procurarse el de
reemplazo en el mercado. En estas circunstancias la indemnizacin de los daos
causados por el atraso en poner a disposicin del acreedor la cantidad de dinero
prometida. As lo corrobora la letra del artculo 1559 del Cdigo Civil al exigir como nica
prueba la del retardo y reconocer por ende, que ste es el nico hecho generador de los
daos que ordena compensar, y al establecer que, adems, que la indemnizacin se
determine con el mrito de una tasa preestablecida, fija y uniforme, pues ello revela el
propsito de resarcir nada ms que los daos ordinarios y ciertos que causa la mora del
deudor.
durante la mora del deudor. (C. Suprema, 8 enero 1975. F. del M. N 194, sentencia. 1,
p.285)
OCTAVO: Que en tal sentido el artculo 1551 del Cdigo Civil seala que el deudor est
en mora en los tres casos que dicho precepto enumera, a saber:
1 Cuando no ha cumplido la obligacin dentro del trmino estipulado, salvo que la ley en
casos especiales exige que se requiera al deudor para constituirlo en mora;
2 Cuando la cosa no ha podido ser dada o ejecutada que y no dentro de cierto espacio
de tiempo, y el deudor han dejado pasar sin darla o ejecutarla;
NOVENO: Que en el caso sub lite, segn se ha dejado establecido, las mercancas de
que dan cuenta las facturas acompaadas a los autos, fueron entregadas por la actora a
la demandada y, no ha sido motivo de debate la circunstancia de que tales instrumentos,
derivados de los negocios comerciales efectuados en diversas oportunidades entre las
partes, contienen una fecha cierta de vencimiento, circunstancia sta que permite
aseverar que la situacin prevista en el numeral primero del artculo 1551 del Cdigo Civil
se identifica precisamente con los presupuestos fcticos de que da cuenta este proceso,
razn por la cual procede colegir que en el especie la deudora, es decir, la demandada,
se encuentra en mora desde el momento que dej de cumplir su obligacin, lo que
sucedi en la fecha estipulada para el vencimiento de cada una de las facturas fundantes
de la demanda. En efecto, las partes pactaron expresamente un plazo en el cual deba
cumplirse la obligacin y ste no era otro que aqul correspondiente a la data de
vencimiento de tales documentos, lo cual no fue obedecido por la demandada.
De manera que en el caso de que se trata, el plazo claramente estipulado, ha surgido
como consecuencia del acuerdo de voluntades que las partes, razn por la cual el solo
hecho de que el deudor no haya cumplido la obligacin en el trmino pactado lo
constituyen mora.
El aserto anterior lleva, a su vez, a concluir que encontrndose el deudor en mora a partir
de la fecha indicada, corresponde que los intereses, que importan una indemnizacin para
el acreedor, se deban, precisamente y como acertadamente lo dispusiera la sentencia
impugnada, desde tal oportunidad, esto es, desde el vencimiento de cada uno de los
instrumentos mercantiles aludidos.
322
DECIMO: Que no puede dejar de hacerse presente que lo anterior resulta tambin acorde
con lo que estatuye el inciso primero del artculo 80 de la ley 18.092, que regula las letras
de cambio y pagar - aplicable al cobro de letras de cambio, de pagars y asimismo al de
cheques (por remisin del artculo 11 de la Ley sobre Cuentas Corrientes Bancarias y
Cheques) - en orden a que: "A partir de la fecha del vencimiento, se devengan intereses
corrientes, a menos que se hubieren estipulado intereses superiores." Norma sta que si
bien trata sobre otros instrumentos mercantiles diversos a los que han servido de
fundamento en este litigio, aborda una situacin similar a aqullos, escenario ste que
lleva a colegir que si existe la misma razn, resulta procedente arribar a idntica
conclusin para el caso de tratarse de un asunto en que la obligacin se encuentra
consignada en las facturas.
representa, motivo por el cual la suma de dinero que en definitiva se obtenga debe ser
equivalente a aquella adeudada, situacin que no siempre se identifica con el mismo valor
numrico, entre una y otra, entendiendo que ste vara en el tiempo, motivo por el cual,
realizar nicamente tal ejercicio consistente en el simple traslado de un monto entre una
poca y otra podra conllevar una cifra inferior a la que le correspondera.
Como el principio bsico en materia de indemnizacin es que esta debe ser completa, y
la inflacin impeda que ello fuera as, la jurisprudencia nacional ha aceptado que el
monto dinerario representativo del dao al tiempo de producirse (o al de la demanda) se
han ajustado en proporcin a la desvalorizacin que sufre la moneada hasta la fecha de la
sentencia (cual la del pago de la indemnizacin). Ello ocurre desde 1969, ao en que la
Corte de Apelaciones de Concepcin, en base a una interpretacin de los artculo s 2314
y 2329 del Cdigo Civil, admiti, por primera vez en Chile, la reajustabilidad de las
indemnizaciones de perjuicios extracontractuales. En da es posible afirmar que es un
principio claramente aceptado el que la indemnizacin de perjuicios debe incluir el
reajuste compensatorio de la desvalorizacin monetaria. En el caso de la indemnizacin
de perjuicios por incumplimiento de una obligacin contractual dineraria (artculo 1559
Cdigo Civil (distinto del inters legal), dentro de los cuales se comprenden los derivados
de la desvalorizacin monetaria. (Las obligaciones restitutorias del Cdigo Civil y la
inflacin. Mauricio Javier Castelblanco Koch. Editorial jurdica de Chile. Pgina 32.)
324
REGLA .
a.- Del texto del artculo 1551 se advierte que el numeral primero contempla el que se ha
llamado requerimiento contractual expreso, el segundo, el denominado requerimiento
contractual tcito y el tercero, el judicial.
Refirindose a la situacin prevista en el nmero uno de la norma indicada, el profesor
Abeliuk seala: Se la llama interpelacin contractual por cuanto en el contrato las partes
han fijado el momento del cumplimiento, con lo cual se considera que el acreedor ha
manifestado a su deudor que hasta esa fecha puede esperarlo y desde que se vence, el
incumplimiento le provoca perjuicios. Cumplido el plazo se van a producir coetneamente
tres situaciones jurdicas: exigibilidad, retardo y mora. Y se la llama expresa para
diferenciarla del caso del N 2 del precepto en que la hay tcitamente. (ob. cit. p. 553) Se
la ha llamado tambin por algunos sistema de mora automtica desde que la mora se
produce automticamente por el mero vencimiento del plazo y su fundamento, para las
obligaciones que tienen plazo determinado, radica en que el deudor conoce exactamente
el momento en que debe cumplir la prestacin, por lo tanto, resulta innecesario acreditar
la responsabilidad del deudor al cumplimiento de un requisito formal como es la
interpelacin judicial.
En consecuencia, para encontrarse en presencia de la figura reseada precedentemente
es imperioso que exista una convencin en que las partes, de comn acuerdo, declaren el
plazo en que debe cumplirse la obligacin de ambas o de una de ellas.
b.- Que en el caso sub lite, segn se ha dejado establecido, las mercancas de que dan
cuenta las facturas acompaadas a los autos, fueron entregadas por la actora a la
demandada y, no ha sido motivo de debate la circunstancia de que tales instrumentos,
derivados de los negocios comerciales efectuados en diversas oportunidades entre las
partes, contienen una fecha cierta de vencimiento, circunstancia sta que permite
325
aseverar que la situacin prevista en el numeral primero del artculo 1551 del Cdigo Civil
se identifica precisamente con los presupuestos fcticos de que da cuenta este proceso,
razn por la cual procede colegir que en el especie la deudora, es decir, la demandada,
se encuentra en mora desde el momento que dej de cumplir su obligacin, lo que
sucedi en la fecha estipulada para el vencimiento de cada una de las facturas fundantes
de la demanda. En efecto, las partes pactaron expresamente un plazo en el cual deba
cumplirse la obligacin y ste no era otro que aqul correspondiente a la data de
vencimiento de tales documentos, lo cual no fue obedecido por la demandada.
De manera que en el caso de que se trata, el plazo claramente estipulado, ha surgido
como consecuencia del acuerdo de voluntades que las partes, razn por la cual el solo
hecho de que el deudor no haya cumplido la obligacin en el trmino pactado lo
constituyen mora.
El aserto anterior lleva, a su vez, a concluir que encontrndose el deudor en mora a partir
de la fecha indicada, corresponde que los intereses, que importan una indemnizacin para
el acreedor, se deban, precisamente y como acertadamente lo dispusiera la sentencia
impugnada, desde tal oportunidad, esto es, desde el vencimiento de cada uno de los
instrumentos mercantiles aludidos.
c.- Que procede, adems, consignar que de la obligacin que se persigue en autos dan
cuenta las facturas adjuntadas a los mismos, instrumentos que manifiestamente
representan la cantidad de dinero que cada una de ellas indica, suma que resulta ser, por
cierto, precisa. Por lo anterior no parece cuestionable, entonces, que la deuda que cobra
el acreedor se encuentra determinada - como lo plantea la recurrente - toda vez que se
refiere a una cantidad cierta que proviene, indefectiblemente, de aquellos acuerdos que
las partes plasmaron, segn se adelant, en las respectivos ttulos que el actor
individualiza, siendo suficiente para llegar a la determinacin final, en cuanto a la cantidad
total, la mera sumatoria de cada uno de los montos all contenidos, conocidos por ambas
partes.
As, tratndose de una obligacin vencida y lquida, procede concluir que la demandada
est en mora y, por lo mismo, corresponde el pago de intereses, a partir de la data
aludida, sin que sea necesario esperar que tal declaracin, en cuanto al monto de la
obligacin, se disponga en la correspondiente sentencia.
A la luz de lo anterior, resultan improcedente, entonces, las alegaciones del recurrente, en
virtud de las cuales sostiene que la mora del deudor slo se verificara, a su entender una
vez que la sentencia dictada en este proceso se encuentre firme o ejecutoriada por
estimar que es requisito para ello que aqul sea reconvenido judicialmente de una
cantidad cierta, determinada y exigible de dinero, lo que no habra sucedido en la especie.
d.- El derecho a la reparacin completa del dao y la extensin requerida para que la
326
CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 21 julio 2009. F. del M. N 552, p. 133. L.P. 42548. CL/JUR/7605/2009
III.- que debern pagarse intereses sobre dicha suma a contar de la fecha en que la
sentencia quede ejecutoriada.
IV.- que no ha lugar a la demanda de indemnizacin de perjuicios por lucro cesante.
V.- que se rechaza la demanda de indemnizacin de perjuicios por dao moral derivado
de responsabilidad extracontractual.
La demandada dedujo apelacin en contra de dicho fallo, la demandante se adhiri a
dicho recurso y una de las salas de la Corte de Apelaciones de San Miguel, por resolucin
de cinco de diciembre de dos mil siete, co rriente a fojas 269, confirm la sentencia en
alzada con las siguientes declaraciones:
a) Que la suma ordenada pagar en la sentencia de primera instancia deber ser
reajustada de acuerdo a la variacin que experimente el ndice de Precios al Consumidor
desde la fecha en que se hicieron exigibles las obligaciones, o sea la fecha de
vencimiento de cada una de las facturas y su pago efectivo.
b) Que asimismo, se debern calcular los intereses corrientes para operaciones
reajustables, desde la fecha de vencimiento de cada una de las facturas y el pago de las
sumas ordenadas pagar.
En contra de esta ltima decisin, la demandada interpuso recurso de casacin en el
fondo.
Se trajeron los autos en relacin.
CONSIDERANDO:
PRIMERO: Que en el recurso en estudio se sostiene que el fallo impugnado ha infringido
los artculos 647 inciso 1, 1551 N 3, 1557 y 1559 del Cdigo Civil, en relacin con los
artculos 19, inciso 1 y 20 del mismo cuerpo legal.
Expone que el pago de los reajustes e intereses corresponde en el caso de autos, desde
la fecha en que el capital se hizo exigible, lo que ocurrir cuando la sentencia definitiva
quede ejecutoriada, como acertadamente lo determin el sentenciador de primera
instancia al sealar que el pago de los intereses corresponda desde que la sentencia se
encontrare ejecutoriada, pues de dicho momento queda determinado el capital y, por
ende, comienzan a devengarse los reajustes e intereses.
As, sostiene que los errores de derecho en que incurre el fallo consisten en que condena
al demandado a pagar reajustes e intereses corrientes para operaciones reajustables a
contar desde la fecha del vencimiento de las facturas, lo que resulta errneo y conduce a
que la demandante opte un enriquecimiento sin causa pues la demanda de autos tuvo por
objeto precisar la suma que el demandado deba pagar.
Aade que, adems, consta del proceso que las relaciones comerciales se remontaban a
varios aos y, encontrndose contestes ambas partes en la efectividad de que los pagos
no eran efectuados en la misma fecha de emisin de las facturas, por lo cual no se puede
considerar dicha fecha como la de su exigibilidad.
328
647, inciso 1, 1551 N 3, 1557, 1559 del Cdigo Civil, por cuanto estima que el pago de
los reajustes e intereses corresponde en el caso de autos, desde la fecha en que el
capital se hizo exigible, lo que ocurrir cuando la sentencia definitiva quede ejecutoriada y
no, como erradamente lo sostiene la sentencia, desde el vencimiento de cada facturas.
Tales conculcaciones denunciadas deben analizarse a la luz de los antecedentes y las
normas que rigen la materia.
SEXTO: Que al efecto resulta procedente tener presente que la avaluacin de perjuicios
consiste en determinar el valor de dinero que corresponde asignar a stos, toda vez que,
por regla general, la obligacin de indemnizar tiene por objeto dar dinero. Esta avaluacin
la pueden hacer las partes, el juez o la ley. De manera tal que la sentencia, si ha habido
una avaluacin convencional, va a condenar a pagar la indemnizacin establecida por las
partes; en cambio, si no existe tal avaluacin, corresponde aplicar la legal, caso en el cual
el juez dispondr el monto que resulte de aqulla y, en subsidio, es decir, a falta de las
dos anteriores, el juez condenar a pagar el monto que determine de acuerdo a las
normas que rigen la indemnizacin de perjuicios, como es el artculo 1556 del Cdigo
Civil.
A la avaluacin legal de perjuicios se refiere el artculo 1559 del citado cuerpo legal, cuyo
inciso primero seala: "Si la obligacin es de pagar una cantidad de dinero, la
indemnizacin de perjuicios por la mora est sujeta a las reglas siguientes". A
continuacin, la regla primera estatuye: "1 Se siguen debiendo los intereses
convencionales, si se ha pactado un inters superior al legal, o empiezan a deberse los
intereses legales, en el caso contrario; quedando, sin embargo, en su fuerza las
disposiciones especiales que autoricen el cobro de los intereses corrientes en ciertos
casos." De acuerdo a esta norma la avaluacin legal se limita a las obligaciones de dinero
toda vez que: "En estas obligaciones el perjuicio por el incumplimiento es evidente, dados
los mltiples usos que el dinero tiene; cuando menos el dinero es generador de intereses,
y por stos que el legislador, al reglamentar la indemnizacin, la ha traducido en el pago
de ellos al acreedor." ("La Obligaciones". Ren Abeliuk M. pg 569).
La regla primera de avaluacin contenida en el precepto aludido importa que la
indemnizacin se traduzca en el pago de intereses, consistiendo as en ello la
indemnizacin de las obligaciones de dinero, es decir, es sta la reparacin que por ley
debe el deudor al acreedor.
Los intereses constituyen una obligacin accesoria de la deuda que normalmente
acompaa a las obligaciones de dinero, razn por la cual se encuentran unidos a la
obligacin que los genera; constituyen un fruto civil y pueden encontrarse pendiente,
mientras se deben y percibidos cuando se cobran, de acuerdo al artculo 647 del cdigo
sustantivo, a su vez, devengan da por da de conformidad al artculo 790 del citado
cuerpo legal.
"Los intereses son, pues, la renta que produce un capital. El dinero por su gran
empleabilidad normalmente produce una utilidad; la mnima utilidad o beneficio que puede
otorgar un capital sus intereses." (Obra cit. Pgina 259)
331
A su vez la ley avala los perjuicios que presume sufre el acreedor por el solo hecho de
que el deudor se constituye en mora, presuncin que justifica, por lo mismo, que el
acreedor no se encuentra obligado a probarlos por otro medio.
La jurisprudencia ha sostenido que: "el artculo 1551 establece un sistema compensatorio
especial para regular los efectos del incumplimiento de las obligaciones pecuniarias. De
acuerdo con l, acreditado el retardo del deudor, el monto de la indemnizacin se
determina con una operacin aritmtica, en funcin de la cantidad adeudaba, la duracin
de la mora y la correspondiente tasa de inters moratorio. Este sistema se aparta de los
principios que gobiernan el incumplimiento de las obligaciones en general, que imponen al
acreedor la carga de probar la especie y monto de los perjuicios, y ordena que la
indemnizacin se determine conforme a la real extensin de los daos resarcible sufridos
en el caso concreto. El sistema compensatorio de excepcin a que se alude, justificase
diversas razones. La primera estriba en la naturaleza fructfera del dinero que lleva a tener
por cierto-sin necesidad de prueba directa-el dao que causa su privacin ilegtima, an la
temporal. La segunda razn est en las necesidades del trfico inconciliables con las
dificultades ordinarias inherentes a la prueba de la especie y monto de los daos, agrava
cuando consisten en la falta de dinero, identificables con la de los mltiples usos y
provechos que depara a su tenedor. El sistema compensatorio excepcional se justifica, en
fin, por que existe la posibilidad objetiva de regular equitativamente la indemnizacin en
una tasa de inters, supuesto que las tasas se fije razonablemente teniendo en cuenta,
ora los frutos que los capitales producen normalmente y de los que le acreedor habra
sido ilegtimamente privado, ora el costo en que habra incurrido, de procurarse el de
reemplazo en el mercado. En estas circunstancias, sobre todo la ltima, evidencian que
los intereses moratorios proveen tan slo a la indemnizacin de los daos causados por el
atraso en poner a disposicin del acreedor la cantidad de dinero prometida. As lo
corrobora la letra del artculo 1559 del Cdigo Civil al exigir como nica prueba la del
retardo y reconocer, por ende, que ste es el nico hecho generador de los daos que
ordena compensar, y al establecer que, adems, que la indemnizacin se determine con
el mrito de una tasa preestablecida, fija y uniforme, pues ello revela el propsito de
resarcir nada ms que los daos ordinarios y ciertos que causa la mora del deudor.
Queda por establecer si el acreedor tiene mrito no a impetrar indemnizacin adicional
por los perjuicios distintos del retardo, pero que con ocasin de esta sufridos. El derecho a
la reparacin completa del dao y la extensin requerida para que la vctima quede
indemne de todo perjuicio legalmente reclamarles, es la regla de oro en materia de
responsabilidad y, en lo que concierne a la contractual, es el ltimo fundamento de los
preceptos del cdigo civil que la regulan, de donde resulta que, salvo norma expresa en
contrario debe recibir plena aplicacin." Contina sealando: "el fluctuante valor de la
moneda nacional, unido a la persistente disminucin de su capacidad adquisitiva y a la
mora del deudor, son elementos que configuran un dao especficamente distinto del que
produce el mero retardo, pues consiste en poner al acreedor en la necesidad de recibir
dinero de igual valor nominal, pero de inferior poder de compra al que debi percibir del
deudor diligente. Es la equidad y debe resarcir tal dao para evitar la lesin patrimonial
injusta del acreedor y el correlativo enriquecimiento ilcito del obligado remiso. En
resolucin, el artculo 1559 del cdigo civil no impide al acreedor de una obligacin
pecuniaria , reclamar, adems de los intereses moratorios que resarzan el retardo, la
indemnizacin de los perjuicios consiguientes a la desvalorizacin monetaria ocurrida
durante la mora del deudor." ( C. Suprema,8 enero 1975. F. del M. N 194, sentencia. 1,
p. 285)
332
2 Cuando la cosa no ha podido ser dada o ejecutada que y no dentro de cierto espacio
de tiempo, y el deudor han dejado pasar sin darla o ejecutarla;
3 En los dems casos, cuando el deudor ha sido judicialmente reconvenido por el
acreedor."
Del texto de la disposicin reproducida se advierte que el numeral primero contempla el
que se ha llamado "requerimiento contractual expreso", el segundo, el denominado
requerimiento contractual tcito y el tercero, el judicial.
Refirindose a la situacin prevista en el nmero uno de la norma indicada, el profesor
Abeliuk seala: "se la llama interpelacin contractual por cuanto en el contrato las partes
han fijado el momento del cumplimiento, con lo cual se considera que el acreedor ha
manifestado a su deudor que hasta esa fecha puede esperarlo, y desde que se vence, el
incumplimiento le provoca perjuicios. Cumplido el plazo se van a producir coetneamente
tres situaciones jurdicas: exigibilidad, retardo y mora. Y se la llama expresa para
diferenciar la del caso del N 2 del precepto en que la ha y tcitamente." (Ob. Cit. Pg
553) Se la ha llamado tambin por algunos "sistema de mora automtica" desde que la
mora se produce automticamente por el mero vencimiento del plazo y su fundamento,
para las obligaciones que tienen plazo determinado, radica en que el deudor conoce
exactamente el momento en que debe cumplir la prestacin, por lo tanto, resulta
innecesario supeditar la responsabilidad del deudor al cumplimiento de un requisito formal
como es la interpelacin judicial."
En consecuencia, para encontrarse en presencia de la figura reseada precedentemente
es imperioso que exista una convencin en que las partes, de comn acuerdo, declaren el
plazo en que debe cumplirse la obligacin de ambas o de una de ellas.
Precisamente, la jurisprudencia ha sealado en cuanto al significado de la expresin
"trmino estipulado" que utiliza la disposicin citada que: "tal expresin es sinnimo en
dicho trmino convenido o prometido, no solo porque est significacin corresponde
literalmente al verbo estipular, segn su etimologa y uso general, sino porque el mismo
concepto le atribuyen tambin entre otros los artculos 16, 1497, 1538, 1542, 1543, 2180,
2204, 2205 y 2208 del Cdigo Civil. La expresin en anlisis implica, pues, una obligacin
contractual." (C. Suprema, 19 de julio 1904. Repertorio de legislacin y jurisprudencia
chilenas, tomo V. Editorial jurdica. Tercera edicin actualizada 1997 Pgina 263.)
"Cuando hay un plazo estipulado corresponde aplicar el N 1 del artculo 1551 y no el
N3." ( C. Suprema, 17 octubre 1905. Repertorio de legislacin y jurisprudencia chilenas,
tomo V. Editorial jurdica. Tercera edicin actualizada 1997 Pgina 264.)
NOVENO: Que en el caso sub lite, segn se ha dejado establecido, las mercancas de
que dan cuenta las facturas acompaadas a los autos, fueron entregadas por la actora a
la demandada y, no ha sido motivo de debate la circunstancia de que tales instrumentos,
derivados de los negocios comerciales efectuados en diversas oportunidades entre las
partes, contienen una fecha cierta de vencimiento, circunstancia sta que permite
aseverar que la situacin prevista en el numeral primero del artculo 1551 del Cdigo Civil
se identifica precisamente con los presupuestos fcticos de que da cuenta este proceso,
razn por la cual procede colegir que en el especie la deudora, es decir, la demandada,
se encuentra en mora desde el momento que dej de cumplir su obligacin, lo que
334
sucedi en la fecha estipulada para el vencimiento de cada una de las facturas fundantes
de la demanda. En efecto, las partes pactaron expresamente un plazo en el cual deba
cumplirse la obligacin y ste no era otro que aqul correspondiente a la data de
vencimiento de tales documentos, lo cual no fue obedecido por la demandada.
De manera que en el caso de que se trata, el plazo claramente estipulado, ha surgido
como consecuencia del acuerdo de voluntades que las partes, razn por la cual el solo
hecho de que el deudor no haya cumplido la obligacin en el trmino pactado lo
constituyen mora.
El aserto anterior lleva, a su vez, a concluir que encontrndose el deudor en mora a partir
de la fecha indicada, corresponde que los intereses, que importan una indemnizacin para
el acreedor, se deban, precisamente y como acertadamente lo dispusiera la sentencia
impugnada, desde tal oportunidad, esto es, desde el vencimiento de cada uno de los
instrumentos mercantiles aludidos.
DECIMO: Que no puede dejar de hacerse presente que lo anterior resulta tambin acorde
con lo que estatuye el inciso primero del artculo 80 de la ley 18.092, que regula las letras
de cambio y pagar - aplicable al cobro de letras de cambio, de pagars y asimismo al de
cheques (por remisin del artculo 11 de la Ley sobre Cuentas Corrientes Bancarias y
Cheques) - en orden a que: "A partir de la fecha del vencimiento, se devengan intereses
corrientes, a menos que se hubieren estipulado intereses superiores." Norma sta que si
bien trata sobre otros instrumentos mercantiles diversos a los que han servido de
fundamento en este litigio, aborda una situacin similar a aqullos, escenario ste que
lleva a colegir que si existe la misma razn, resulta procedente arribar a idntica
conclusin para el caso de tratarse de un asunto en que la obligacin se encuentra
consignada en las facturas.
UNDECIMO: Que procede, adems, consignar que de la obligacin que se persigue en
autos dan cuenta las facturas adjuntadas a los mismos, instrumentos que
manifiestamente representan la cantidad de dinero que cada una de ellas indica, suma
que resulta ser, por cierto, precisa. Por lo anterior no parece cuestionable, entonces, que
la deuda que cobra el acreedor se encuentra determinada - como lo plantea la recurrente
- toda vez que se refiere a una cantidad cierta que proviene, indefectiblemente, de
aquellos acuerdos que las partes plasmaron, segn se adelant, en las respectivos ttulos
que el actor individualiza, siendo suficiente para llegar a la determinacin final, en cuanto
a la cantidad total, la mera sumatoria de cada uno de los montos all contenidos,
conocidos por ambas partes.
As, tratndose de una obligacin vencida y lquida, procede concluir que la demandada
est en mora y, por lo mismo, corresponde el pago de intereses, a partir de la data
aludida, sin que sea necesario esperar que tal declaracin, en cuanto al monto de la
obligacin, se disponga en la correspondiente sentencia.
A la luz de lo anterior, resultan improcedente, entonces, las alegaciones del recurrente, en
virtud de las cuales sostiene que la mora del deudor slo se verificara, a su entender una
vez que la sentencia dictada en este proceso se encuentre firme o ejecutoriada por
estimar que es requisito para ello que aqul sea reconvenido judicialmente de una
cantidad cierta, determinada y exigible de dinero, lo que no habra sucedido en la especie.
335
una cantidad inferior. Para que lo dicho sea posible es necesario que aquella
revalorizacin del monto de dinero referida se efecte a partir de la data en que la
obligacin se hizo exigible, lo cual ha sucedido precisamente, en el caso sub judice, en la
oportunidad en que las facturas vencieron, toda vez que a partir de dicha fecha la
demandante tena derecho a recibir el valor de las mercancas entregadas a la
demandada.
DECIMO TERCERO: Que como corolario debe decirse que, atento a lo expresado, no se
constata, que el fallo censurado haya incurrido en alguna infraccin de las normas
invocadas por la recurrente, toda vez que al resolver sobre la oportunidad a partir de la
cual procede aplicar el reajuste y devengar los intereses, lo han hecho de acuerdo a los
antecedentes del caso y aplicando e interpretando correctamente las normas que rigen la
materia, razn por la cual el recurso de nulidad de fondo no puede prosperar y debe
necesariamente ser desestimado.
Por estas consideraciones y visto, adems, lo dispuesto en los artculos 764 y 767 del
Cdigo de Procedimiento Civil, se rechaza, con costas, el recurso de casacin en el
fondo, deducido en el primer otros de fojas 270, por el abogado Sr. Roberto Ivn Castro
Navarro en representacin de la demandada, en contra de la sentencia de cinco de
diciembre de dos mil siete, escrita a fojas 229.
Regstrese y devulvase.
Redaccin a cargo del Ministro Sr. Milton Juica A.
N 782-08.
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema por los Ministros Sres. Milton Juica
A., Sergio Muoz G., Sra. Margarita Herreros M. y Sr. Juan Araya E. y Abogado
Integrante Sr. Jorge Medina C.
No firman la Ministra Sra. Herreros y el Abogado Integrante Sr. Medina, no obstante haber
concurrido ambos a la vista del recurso y acuerdo del fallo, po r estar en comisin de
servicios la primera y ausente el segundo.
Autorizado por la Secretaria Sra. Rosa Mara Pinto Egusquiza.
En Santiago, a veintiuno de julio de dos mil nueve, notifiqu en Secretara por el Estado
Diario la resolucin precedente.
337
Tema Clave
Interpretacin
Contrato.
Tribunal
del C. Suprema
Considerando
8., 9. y 10.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
OCTAVO: Que en este orden de ideas, es preciso tener en cuenta que la interpretacin
de los contratos queda dentro de las facultades propias de los magistrados de la
instancia, los que pueden ser revisados por esta Corte de Casacin slo en el evento que
por tal labor se desnaturalice el acuerdo al que ellas han llegado, transgredindose con lo
anterior la ley del contrato prevista en el artculo 1545 del Cdigo Civil, precepto que en la
338
NOVENO: Que la labor interpretativa de los actos y contratos tiene por objeto conocer la
intencin comn de los contratantes, la voluntad que han expresado al celebrarlo, aquello
en lo que han consentido, lo cual les uni y determin que contrataran, aspecto que,
conforme al artculo 1560 del Cdigo Civil, debe conocerse "claramente" para estarse a
ella ms que al texto del acuerdo.
El Cdigo Civil se refiere a estas reglas, fundamentalmente, en los artculos 1560 a 1566,
las que ciertamente no tienen un orden de prelacin, sino que su importancia se deriva de
la incidencia que tienen en determinar en mayor o menor medida la intencin de las
partes, pero considerando todas las circunstancias que rodearon la celebracin del
contrato y no nicamente su texto, en todo lo que ha sido el iter contractual, el marco
global de las relaciones que unen a las partes e incluso lo relativo a la etapa de
cumplimiento. El primer aspecto a considerar es la determinacin de lo pactado, esto es
su texto, circunstancia que ya ha sido precisada con anterioridad y en torno a la que no
existe controversia. (Considerando cuarto).
En segundo lugar corresponde realizar la labor interpretativa del convenio, para lo cual se
considerar especialmente la utilidad de las clusulas del contrato, debiendo preferirse el
sentido en que pueden producir algn efecto, como tambin tener presente el riesgo de
redaccin del texto de la convencin. En esta labor, se ha dicho, que el sistema subjetivo
de interpretacin de los contratos se atenu al agregarse en el referido artculo 1560 del
Cdigo Civil el adverbio "claramente", por lo que se recurrir a la intencin de las partes
en la convencin o contrato cuando ella se desprenda y distinga perfectamente, no
resultando procedente construir intenciones o voluntades presuntas o virtuales, sino que
339
As, la interpretacin resulta necesaria cuando los trminos de una convencin suscitan
controversia entre las partes respecto de los distintos efectos que han de tener sus
estipulaciones. En esta labor se han clasificado las reglas legales entre aquellas referidas
al contrato propiamente tal y las que reflejan un comportamiento o acceden al contrato
mismo.
De esta forma se puede sealar, siguiendo al profesor Lpez Santa Mara, que existen
reglas de interpretacin intrnsecas al contrato, que en nuestro pas estn constituidas
por: a).- Armona de las clusulas (artculo 1564 del Cdigo Civil); b).- Utilidad de las
clusulas (artculo 1562); y c).- Trminos ambiguos (artculo 1563 inciso primero).
340
Enunciado lo que es el principio del respeto al proceder individual y que obrar contra acto
propio no vale, la interpretacin autntica se presenta como una de las de mayor
importancia. Subrayando su capital importancia los autores chilenos, Claro Solar, por
ejemplo, estiman que en un eventual orden de prelacin, ella debera figurar
inmediatamente a continuacin del artculo 1560. "La interpretacin autntica es la reina
de todas las interpretaciones y no hay que creer a aquellos tratadistas que rechazan esa
especie de interpretacin en materia contractual. Tal error nace de la mala aplicacin de
un principio muy verdadero, el cual dice que despus de concluido el contrato, ninguna de
las partes tiene libertad para modificar a su capricho la voluntad ya declarada e
interpretarlo a su guisa. Pero este principio no es, ciertamente, acatado, si las dos partes
se ponen de acuerdo para interpretar su voluntad "En la hermenutica de los contratos, la
inteligencia, el sentido que le dan los contratantes es el faro ms seguro para conocer la
voluntad". Interpretando autnticamente, la Corte Suprema ha dicho: "La regla del inciso 3
del artculo 1564 es de importancia principalmente en la interpretacin de los contratos
que contienen obligaciones de dar o hacer, ya que nada puede indicar con ms acierto la
voluntad de las partes en esta materia que la ejecucin llevada a cabo por ellos mismos
de las cosas que, con arreglo a lo pactado, estaban obligadas a dar o hacer". (Jorge
Lpez Santa Mara, op. cit. pgina 96);
REGLA .
a.- La interpretacin de los contratos queda dentro de las facultades propias de los
magistrados de la instancia, los que pueden ser revisados por esta Corte de Casacin
slo en el evento que por tal labor desnaturalice el acuerdo al que las partes han llegado,
transgredindose con lo anterior la ley del contrato prevista en el artculo 1545 del C.Civ.
Ello ocurre, ciertamente, cuando se alteran las consecuencias de sus clusulas,
desnaturalizndolas y en tales circunstancias el poder soberano de los jueces del pleito
para establecer los hechos de la causa, no puede extenderse a su apreciacin jurdica y a
la determinacin de la ley que les sea aplicable (). (Luis Claro Solar, Derecho Civil
Chileno y Comparado, p. 474).
b.- La labor interpretativa de los actos y contratos tiene por objeto conocer la intencin
comn de los contratantes, la voluntad que han expresado al celebrarlo, aquello en lo que
han consentido, lo cual les uni y determin que contrataran, aspecto que conforme al
artculo 1560 del C.Civ. debe conocerse claramente para estarse a ella ms que al texto
del acuerdo.
c.- Para llevar adelante esta labor y que no se extrave el intrprete, el legislador ha
entregado diversas reglas, que sirven en la consecucin de su actividad. Es la ley la que
indica al intrprete cmo debe actuar para fijar la voluntad de quienes convinieron.
El Cdigo Civil se refiere a estas reglas, fundamentalmente, en los artculos 1560 a 1566,
las que ciertamente no tienen un orden de prelacin, sino que su importancia se deriva de
341
4. CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 21 julio 2009. M.J. N 20781.
Corte Suprema
342
Fallo:
VISTO:
Funda su pretensin sealando que con fecha 3 de diciembre de 1991, los accionistas del
Banco del Pacifico -antecesor legal del demandante-, las sociedad Dlano y Compaa antes Cardoen y Compaa- e Inversiones Cardoen S.A., transfirieron la aludida entidad
bancaria, a travs de la venta de sus acciones y opciones de acciones, a Banesto
Banking Corporation y don Luis Cid Alonso, quienes lo adquirieron en la proporcin del
99.99999% y 0.00001%, respectivamente. Aade que a raz del cambio de control de la
institucin, sta modific su nombre o razn social por la de Banesto Chile Bank.
despus del veintinueve de noviembre de mil novecientos noventa y dos por citacin,
liquidacin o giro;
A. dos) Que el Banco haya dado aviso a las vendedoras antes del vencimiento del plazo
en que deban oponerse las defensas correspondientes; y
A. tres) Que el Banco oponga en forma oportuna todas las defensas legales de que
razonablemente disponga, hasta que se dicte sentencia de trmino del juicio".
Expresa que con fecha 12 de agosto de 1992, Banesto fue notificado de la citacin N 89,
de la Direccin Nacional del Servicio de Impuestos Internos de 11 de agosto de 1992 y
que, en cumplimiento del convenio, mediante carta de 12 de septiembre de 1992 se dio
aviso de dicha circunstancia al representante legal de Inversiones Cardoen S.A., don
Patricio Claro Grez.
Explica que la referida citacin continu con las correspondientes liquidaciones Ns 1276,
1277, 1278 y 1279, de 15 de diciembre de 1992, contra las cuales se formul el
correspondiente reclamo, que fue rechazado por el Servicio de Impuestos Internos por
sentencia de 11 de enero de 1995, resolucin del Juez Tributario que fue apelada ante la
Corte de Apelaciones de Santiago, la que, a su turno, acogi el respectivo recurso en
todas sus partes. Aade que en contra de este ltimo fallo el Fisco interpuso recurso de
casacin en el fondo, el que fue declarado inadmisible por la Corte Suprema por
sentencia de 31 de marzo de 1999.
Manifiesta que la defensa de los intereses del Banco fue entregada, desde que se dict la
sentencia por el Servicio de Impuestos Internos, al Estudio de Abogados Urenda,
Rencoret, Orrgo, y Drr, cuyos honorarios ascendieron a la suma de $16.384.092,
siendo cancelados por Inversiones Banesto S.A., de todo lo cual, expresa, se mantuvo
permanentemente informada a la demandada mediante cartas enviadas con fecha 3 de
diciembre de 1998, 30 de abril de 1999, 28 de mayo de 1999 y 20 de julio de 1999.
Argumenta que el referido honorario profesional debe ser asumido, en definitiva, por
Inversiones Cardoen S.A., actual sucesora legal de Dlano y Compaa, como parte
integrante de la responsabilidad arrogada por dichas sociedades frente al ex Banco del
Pacifico, pese a lo cual, la demandada ha desconocido su obligacin al efecto.
Por sentencia de veintisis de junio de dos mil tres, escrita a fojas 100, el seor juez titular
del referido tribunal acogi, con costas, la demanda y, en consecuencia, conden a la
demandada a pagar la actora la suma de $ 16.384.092, ms reajustes e intereses desde
la fecha de notificacin de la demanda y hasta su pago efectivo.
CONSIDERANDO:
PRIMERO: Que el recurrente sostiene que la sentencia de segundo grado, que revoc el
fallo del tribunal a quo, rechazando, en definitiva, la demanda de autos, ha sido dictada
con infraccin a los artculos 1449, 1560 y 1563 del Cdigo Civil, segn pasa a explicar:
345
Expresa que el fallo impugnado en su primer considerando hace suyo lo alegado por la
demandada, en cuanto a que el convenio no sera jurdicamente una estipulacin en favor
de otro, al afirmar que la razn de ello es que la "demandante" tiene "inters personal" en
dicho compromiso, lo que constituye, a su entender, un claro error de derecho en la
aplicacin del artculo 1449 del Cdigo Civil.
Aade que el artculo 1449 del Cdigo Civil no exige que el contratante tenga inters en la
estipulacin, sino solamente que ste acuerdo beneficie a un tercero, hiptesis que,
segn estima, aconteci en la especie.
Afirma que en el caso en particular, aparece claramente que lo buscado por las partes fue
que las vendedoras garantizarn toda contingencia tributaria, penal, bancaria o laboral del
Banco del Pacifico que lo s compradoras desconocieren al momento del contrato,
comprometindose, de este modo, a mantener inclume el patrimonio de la institucin
bancaria.
346
Seala que como el acuerdo de las partes fue que las vendedoras deban mantener
indemne la fortuna del Banco del Pacifico, asumiendo entre otras, las sumas que debieran
ser pagadas al Fisco, es obvio concluir que para conservar sin menoscabo dicho peculio,
las vendedoras son responsables de los gastos en que incurri el Banco para defenderse
y evitar, precisamente, el pago de impuestos, multas y reajustes al Fisco.
Aade, finalmente, que en virtud de lo dispuesto en el artculo 1560 del Cdigo Civil, como
en el caso sub lite se conoce claramente la intencin de las partes, debe estarse ms a
ella que a lo literal de las palabras y de conformidad, adems, con lo sealado en el
artculo 1563 del mismo estatuto legal, debe preferirse la interpretacin que mejor cuadre
con la naturaleza del contrato;
SEGUNDO: Que la sentencia recurrida, que revoc el fallo de primer grado, rechazando,
en definitiva, la demanda de autos, razona para ello que "atendido lo pactado en la
clusula segunda del convenio celebrado entre "Inversiones Cardoen S.A. y Dlano y
Compaa" (antes Cardoen y Compaa) con "Banesto Banking Corporation", de tres de
diciembre de mil novecientos noventa y uno, documento acompaados a los autos y no
objetado, se infiere que el sentido de dicha clusula dice relacin con la obligacin de
solucionar tributos pendientes"" arribando en virtud de tal reflexin a la decisin de la
controversia sub lite, en forma cabal y suficiente;
SEXTO: Que a lo anterior, cabe agregar, que la sentencia objeto del recurso en estudio, a
diferencia de lo que sostiene el recurrente, no da lugar a la defensa de la demandada, en
cuanto a admitir la falta de legitimacin activa de la demandante, en razn de no haberse
convenido una estipulacin en favor suyo, puesto que el motivo primero, cuyas supuestas
consideraciones merecen tanto reproche de su parte, se limita a exponer en sntesis una
de las alegaciones que la demandada sostuvo en su defensa y que reiter en el recurso
de apelacin. As, el aludido razonamiento expresa: "Que la pretensin de la demandada
al invocar como argumento la falta de titularidad, lo funda en ser continuadora legal del
Banco del Pacifico, haciendo recaer en la especie la limitacin del artculo 1449 del
Cdigo Civil en relacin en la estipulacin a favor de una tercera persona (sic). Seala
esa parte que el citado precepto legal, dispone que la estipulacin a favor de otro no
alcanza a la demandante de autos, puesto que tal clusula convencional segn el
documento acompaado signado N 7, no est en favor de Banesto, por lo que se
desvirtuara la regla citada, al tener la parte invocante de ella (la demandante) un inters
personas en la estipulacin, por lo que no estaramos en presencia de la hiptesis en
autos de la institucin referida."
Por su parte el inciso primero del segundo precepto legal aludido dispone que "En
aquellos casos en que no apareciere voluntad contraria deber estarse a la interpretacin
que mejor cuadre con la naturaleza del contrato.";
OCTAVO: Que en este orden de ideas, es preciso tener en cuenta que la interpretacin
de los contratos queda dentro de las facultades propias de los magistrados de la
instancia, los que pueden ser revisados por esta Corte de Casacin slo en el evento que
por tal labor se desnaturalice el acuerdo al que ellas han llegado, transgredindose con lo
anterior la ley del contrato prevista en el artculo 1545 del Cdigo Civil, precepto que en la
especie no se denunci como infringido, adems, de las disposiciones pertinentes a la
interpretacin de los contratos. Ello ocurre, ciertamente, cuando se alteran las
consecuencias de sus clusulas, desnaturalizndolas y, en tales circunstancias, "el poder
soberano de los jueces del pleito para establecer los hechos de la causa, no puede
extenderse a su apreciacin jurdica y a la determinacin de la ley que les sea aplicable; y
por consiguiente la ilegal apreciacin de las clusulas del contrato y las errneas
consecuencias que de esta ilegal apreciacin deduzcan los jueces del pleito deben ser
sometidas a la censura de la Corte Suprema por medio del recurso de casacin por
violacin del artculo 1545, o sea por violacin de la ley del contrato." (Luis Claro Solar,
"Derecho Civil Chileno y Comparado", pg. 474);
349
NOVENO: Que la labor interpretativa de los actos y contratos tiene por objeto conocer la
intencin comn de los contratantes, la voluntad que han expresado al celebrarlo, aquello
en lo que han consentido, lo cual les uni y determin que contrataran, aspecto que,
conforme al artculo 1560 del Cdigo Civil, debe conocerse "claramente" para estarse a
ella ms que al texto del acuerdo.
El Cdigo Civil se refiere a estas reglas, fundamentalmente, en los artculos 1560 a 1566,
las que ciertamente no tienen un orden de prelacin, sino que su importancia se deriva de
la incidencia que tienen en determinar en mayor o menor medida la intencin de las
partes, pero considerando todas las circunstancias que rodearon la celebracin del
contrato y no nicamente su texto, en todo lo que ha sido el iter contractual, el marco
global de las relaciones que unen a las partes e incluso lo relativo a la etapa de
cumplimiento. El primer aspecto a considerar es la determinacin de lo pactado, esto es
su texto, circunstancia que ya ha sido precisada con anterioridad y en torno a la que no
existe controversia. (Considerando cuarto).
En segundo lugar corresponde realizar la labor interpretativa del convenio, para lo cual se
considerar especialmente la utilidad de las clusulas del contrato, debiendo preferirse el
sentido en que pueden producir algn efecto, como tambin tener presente el riesgo de
redaccin del texto de la convencin. En esta labor, se ha dicho, que el sistema subjetivo
de interpretacin de los contratos se atenu al agregarse en el referido artculo 1560 del
Cdigo Civil el adverbio "claramente", por lo que se recurrir a la intencin de las partes
en la convencin o contrato cuando ella se desprenda y distinga perfectamente, no
resultando procedente construir intenciones o voluntades presuntas o virtuales, sino que
se debe recurrir a otros criterios de interpretacin o mejor dicho de determinacin de la
voluntad, con un carcter ms objetivo;
celebrado. La doctrina ha tenido la oportunidad de estudiar este punto precisando que "la
existencia de una convencin (cuestin de prueba) y el alcance de una convencin
(cuestin de interpretacin) son dos aspectos diferentes, que no deben confundir se".
(Jorge Lpez Santa Mara, "Sistemas De Interpretacin De Los Contratos", Ediciones
Universitarias de Valparaso, 1971, pgina 66).
As, la interpretacin resulta necesaria cuando los trminos de una convencin suscitan
controversia entre las partes respecto de los distintos efectos que han de tener sus
estipulaciones. En esta labor se han clasificado las reglas legales entre aquellas referidas
al contrato propiamente tal y las que reflejan un comportamiento o acceden al contrato
mismo.
De esta forma se puede sealar, siguiendo al profesor Lpez Santa Mara, que existen
reglas de interpretacin intrnsecas al contrato, que en nuestro pas estn constituidas
por: a).- Armona de las clusulas (artculo 1564 del Cdigo Civil); b).- Utilidad de las
clusulas (artculo 1562); y c).- Trminos ambiguos (artculo 1563 inciso primero).
Enunciado lo que es el principio del respeto al proceder individual y que obrar contra acto
propio no vale, la interpretacin autntica se presenta como una de las de mayor
importancia. Subrayando su capital importancia los autores chilenos, Claro Solar, por
ejemplo, estiman que en un eventual orden de prelacin, ella debera figurar
inmediatamente a continuacin del artculo 1560. "La interpretacin autntica es la reina
de todas las interpretaciones y no hay que creer a aquellos tratadistas que rechazan esa
especie de interpretacin en materia contractual. Tal error nace de la mala aplicacin de
un principio muy verdadero, el cual dice que despus de concluido el contrato, ninguna de
las partes tiene libertad para modificar a su capricho la voluntad ya declarada e
interpretarlo a su guisa. Pero este principio no es, ciertamente, acatado, si las dos partes
351
Por su parte el artculo 1855 establece que "Si la sentencia negare la eviccin, el
vendedor no ser obligado a la indemnizacin de perjuicios que la demanda hubiere
causado al comprador, sino en cuanto la demanda fuere imputable a hecho o culpa del
vendedor", pudiendo, entonces, concluirse que ser de cargo de l vendedor el pago de las
costa del juicio nicamente en el caso de que exista sentencia adversa para el comprador
y favorable al tercero, habindose producido en la prctica la eviccin, siempre y cuando
no se trate de las costas en que el comprador haya incurrido defendindose, despus de
haberse allanado el vendedor al saneamiento. (artculo 1845 del Cdigo Civil);
Se previene que el Ministro Sr. Muoz no comparte el prrafo que corre desde las
expresiones "de la cual da cuenta"." y hasta ""y que con motivo de ellas deban ser
pagados al Fisco", del motivo undcimo.
N 1.556-08.-.
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema por los Ministros Sres. Milton Juica
A., Sergio Muoz G., Sra. Margarita Herreros M., Sres. Juan Araya E. y Guillermo Silva
G.
353
354
Tema Clave
Consentimiento.
Forzada).
Tribunal
(Venta C. Suprema
Considerando
10.
355
As, acorde a lo dispuesto en el inciso tercero del artculo 671 del Cdigo Civil, en las
ventas forzadas que se hacen por decreto judicial a peticin de un acreedor, en pblica
subasta, la persona cuyo dominio se transfiere es el tradente, y el juez su representante
legal, norma sta que resulta necesario complementar con lo dispuesto en el inciso
primero de la misma disposicin legal, segn la cual, se llama tradente la persona que por
la tradicin transfiere el dominio de la cosa entregada por l o a su nombre, y adquirente
la persona que por la tradicin adquiere el dominio de la cosa recibida por l o a su
nombre.
A su turno, el artculo 1824 del Cdigo Civil en su inciso primero explicita que, las
obligaciones del vendedor se reducen en general a dos, la entrega o tradicin, y el
saneamiento de la cosa vendida, situacin sta que, a la luz de lo dispuesto en el artculo
1826 del mismo cuerpo de leyes, -segn se anota en su inciso primero- importa que el
vendedor es obligado a entregar la cosa vendida inmediatamente despus del contrato o
a la poca prefijada en l. En este contexto, conforme al marco jurdico manifestado
precedentemente y, por tratarse el caso sub lite de una venta forzada en razn de un
decreto judicial a peticin de un acreedor y efectuada en pblica subasta, es evidente que
el juez del Primer Juzgado del Crimen de Rengo actu como representante legal del
tradente, del vendedor-deudor, asumiendo en el ejercicio de dicha representacin la
posicin jurdica propia del tradente, debiendo cumplir con las obligaciones que le impone
la ley, entre las que se encuentra la de hacer la entrega o tradicin de la cosa vendida, sin
perjuicio de lo cual es dable reflexionar que el ejercicio de dicha representacin no es
ilimitado y que, habiendo efectuado aqul la entrega jurdica del inmueble al comprador,
no resulta razonable ni aceptable que el vendedor justifique, ahora, su negativa a entregar
materialmente el bien o soslaye su propia responsabilidad al efecto, en un supuesto
incumplimiento del aludido funcionario, pues sus afirmaciones sobre el particular
contravienen, entre otros, los principios de la buena fe y el acto propio sobre los cuales
descansa el derecho en general;
19. REGLA .
a.- Si bien de acuerdo a las reglas generales el consentimiento debe ser exento de vicios,
libre y espontneo, est regla tiene una excepcin en caso de las ventas forzadas
dispuestas por decreto judicial en las que se ha entendido que el deudor otorg su
consentimiento de antemano, al contraer la obligacin y someterse al derecho de prenda
general sobre sus bienes a favor del acreedor, o bien, al colocarse en la situacin fctica
que la ley ha previsto como fuente de responsabilidad civil.
356
1. CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 28 julio 2009. M.J. N 20721.
Corte Suprema
Fallo:
VISTO:
En estos autos rol N 58.386, seguidos ante el Primer Juzgado Civil de Rengo, juicio en
procedimiento ordinario, caratulados "Saavedra Muoz, Hctor Ren c/ Pino Rodrguez,
Pedro Segundo", don Hctor Ren Saavedra Muoz dedujo demanda de cumplimiento de
contrato de compraventa con indemnizacin de perjuicios, en contra de Pedro Segundo
Pino Rodrguez.
Funda su pretensin sealando que es dueo de los locales A-2 y B-2 del ex Mercado
Municipal de Rengo, inscritos a su nombre a fojas 2.018, N 1632, del Registro de
Propiedad del Conservador de Bienes Races de Rengo del ao 2005.
Explica que los adquiri por compraventa forzada efectuada al demandado -en su calidad
de ejecutado civil-, en los autos penales rol N 67.336, por cuasidelito de lesiones graves,
seguido ante el Primer Juzgado del Crimen de Rengo, en contra don Pablo Alex Gonzlez
Mndez, en carcter de autor y, en contra del demandado, en su calidad de tercero
civilmente responsable.
escritura pblica fue otorgada el 24 de junio de 2005 ante el Notario Pblico de Rengo
don Jorge Zapata Medina.
Por sentencia de tres de julio de dos mil siete, escrita a fojas 144, el juez titular del
referido tribunal a quo hizo lugar a la demanda en todas sus partes y, en consecuencia,
orden al demandado proceder a la entrega de los locales A-2 y B-2 del ex Mercado
Municipal dentro del plazo de diez das hbiles, contados desde que el fallo se encuentre
ejecutoriado, bajo apercibimiento de lanzamiento con auxilio de la fuerza pblica; conden
al demandado a indemnizar los perjuicios causados al actor, segn liquidacin que en su
oportunidad dispuso efectuar al Secretario del Tribunal; y declar que dicho litigante deba
satisfacer las costas de la causa, por haber resultado totalmente vencido. Apelado el fallo
por el demandado, una de las Salas de la Corte de Apelaciones de Rancagua, por
sentencia de trece de marzo de dos mil ocho, que se lee a fojas 175, lo confirm, con
costas del recurso.
358
En contra de esta ltima decisin la aludida parte dedujo recurso de casacin en el fondo.
CONSIDERANDO:
PRIMERO: Que el recurrente sostiene que la sentencia de segundo grado, que confirm
el fallo del tribunal a quo, acogiendo, en definitiva, la demanda de autos, ha sido dictada
con infraccin de disposiciones legales, segn pasa a explicar:
a).- Denuncia transgresin a los artculos 1824, 1826, 1551, 670, 671, 672 y 686 del
Cdigo Civil, en relacin con el artculo 767 del Cdigo de Procedimiento Civil.
b).- Acusa vulneracin a los artculos 346, 348 y 384 del Cdigo de Procedimiento Civil y
1702 del Cdigo Civil.
360
TERCERO: Que son hechos establecidos por los jueces del mrito, relevantes para la
resolucin del presente recurso, los siguientes: 1.-Que el demandante don Hctor Ren
Saavedra Muoz adquiri en compraventa forzada, llevada a efecto en la causa criminal
rol N 67.336, seguida ante el Primer Juzgado del Crimen de Rengo, los locales
comerciales A-2 y B-2 del ex Mercado Municipal de Rengo, anteriormente pertenecientes
al demandado don Pedro Segundo Pino Rodrguez, inscribiendo el dominio de ambos
inmuebles a su nombre, a fojas 2.018, N 1632, del Registro de Propiedad del
Conservador de Bienes Races de Rengo del ao 2005.
2.- Que el remate respectivo se realiz con fecha 9 de marzo de 2005, otorgndose la
escritura pblica de compraventa el 24 de junio de 2005 e inscribindose, en definitiva, los
inmuebles a nombre del comprador el 8 de septiembre de 2005.
361
QUINTO: Que para un adecuado anlisis de los errores de derecho denunciados por el
recurrente, debe consignarse que las infracciones de las leyes reguladoras de la prueba,
como lo ha reconocido reiteradamente esta Corte, se entienden vulneradas,
fundamentalmente, cuando los sentenciadores invierten el onus probandi, rechazan las
pruebas que la ley admite, aceptan las que la ley rechaza, desconocen el valor probatorio
de las que se produjeron en el proceso cuando la ley les asigna uno determinado de
carcter obligatorio o alteran el orden de precedencia que la ley les diere.
Por ello, no son susceptibles de ser revisadas por la va de la casacin las decisiones de
los sentenciadores basadas en disposiciones que entregan libremente la justipreciacin
de los diversos elementos probatorios, lo que ocurre en nuestra legislacin procesal civil
con la normativa sobre ponderacin de la prueba testimonial y confesional, entre otras, y
que conlleva a desestimar, desde ya, la infraccin denunciada al artculos 384 del Cdigo
de Procedimiento Civil;
SEXTO: Que luego de lo dicho, resulta fundamental precisar que los artculos 346 y 348
del Cdigo de Procedimiento Civil no revisten el carcter de normas reguladoras de la
prueba, toda vez que el primero de los citados preceptos se limita a establecer las
distintas situaciones en que los documentos privados se tendrn por reconocidos en
juicio, en circunstancias, que el segundo refiere nicamente la oportunidad procesal en
que los instrumentos pueden ser acompaados al proceso;
362
Dicho lo anterior, resulta pertinente recordar que solamente los jueces del fondo se
encuentran facultados para establecer los hechos de la causa y que efectuada
correctamente dicha labor, habindose establecido stos con sujecin al mrito de los
antecedentes, probanzas aportadas por las partes, interpretacin y aplicacin de las
normas atinentes al caso en estudio, ellos resultan inamovibles para este tribunal,
conforme a lo previsto en el artculo 785 del Cdigo de Procedimiento Civil, no siendo
posible su revisin por la va de la nulidad que se revisa;
NOVENO: Que, finalmente, respecto de la denuncia de infraccin a los artculos 670, 671,
672, 686, 1551, 1824 y 1826 del Cdigo Civil, la cual se orienta bsicamente a afirmar
que la obligacin de entrega de los inmuebles sub lite, se habra concretado con la sola
inscripcin conservatoria a nombre del actor, situacin que descartara el retardo o la
mora de parte del demandado en el cumplimiento de su obligacin de entrega y,
consecuentemente, la existencia de perjuicios de que deba responder, resulta pertinente
sealar que la correcta interpretacin de los preceptos legales previamente apuntados,
permite concluir que, en el caso de bienes inmuebles, el vendedor se encuentra obligado
tanto a efectuar la entrega legal -que se verifica por medio de la correspondiente
inscripcin conservatoria-, como a realizar la entrega material del bien objeto del contrato
de compraventa.
Sobre este asunto en particular, diversos fallos de esta Corte Suprema (mayo de 1921,
marzo de 1929, diciembre de 1946, julio de 1951 y noviembre de 1976) han asentado la
siguiente doctrina: la obligacin de entregar del vendedor debe entenderse en un sentido
amplio de entrega legal y material, pudiendo concluirse que tal deber comprende ambos
363
actos y slo puede entenderse satisfecha cuando, tratndose de bienes races, se verifica
la inscripcin de la escritura pblica del contrato y cuando el comprador entra en posesin
material del inmueble vendido, pues sin la transferencia real de la cosa vendida, el
adquirente no podra gozar y disponer libremente de ella. Si falta una de esas entregas,
hyase o no realizado la otra, el comprador tendr derecho para pedir el cumplimiento del
contrato o su resolucin y, en ambos caso, con la correspondiente indemnizacin de
perjuicios.
4.- Por ltimo, cabe recordar que el Cdigo Civil hace mencin expresamente a la entrega
real de la cosa, al tratar de los plazos en que prescribe la accin de saneamiento por
vicios redhibitorios, sealando, al efecto, el artculo 1866 del aludido cuerpo legal que: "El
tiempo se contar desde la entrega real".
espontneo respecto de ambos contratantes, dicha mxima reconoce como exce pcin el
caso de las ventas forzadas dispuestas por decreto judicial, en las que se ha entendido
que el deudor otorg su consentimiento de antemano, al contraer la obligacin y
someterse al derecho de prenda general sobre sus bienes a favor del acreedor o, bien, al
colocarse en la situacin fctica que la ley ha previsto como fuente de responsabilidad
civil.
As, acorde a lo dispuesto en el inciso tercero del artculo 671 del Cdigo Civil, en las
ventas forzadas que se hacen por decreto judicial a peticin de un acreedor, en pblica
subasta, la persona cuyo dominio se transfiere es el tradente, y el juez su representante
legal, norma sta que resulta necesario complementar con lo dispuesto en el inciso
primero de la misma disposicin legal, segn la cual, se llama tradente la persona que por
la tradicin transfiere el dominio de la cosa entregada por l o a su nombre, y adquirente
la persona que por la tradicin adquiere el dominio de la cosa recibida por l o a su
nombre.
A su turno, el artculo 1824 del Cdigo Civil en su inciso primero explicita que, las
obligaciones del vendedor se reducen en general a dos, la entrega o tradicin, y el
saneamiento de la cosa vendida, situacin sta que, a la luz de lo dispuesto en el artculo
1826 del mismo cuerpo de leyes, -segn se anota en su inciso primero- importa que el
vendedor es obligado a entregar la cosa vendida inmediatamente despus del contrato o
a la poca prefijada en l. En este contexto, conforme al marco jurdico manifestado
precedentemente y, por tratarse el caso sub lite de una venta forzada en razn de un
decreto judicial a peticin de un acreedor y efectuada en pblica subasta, es evidente que
el juez del Primer Juzgado del Crimen de Rengo actu como representante legal del
tradente, del vendedor-deudor, asumiendo en el ejercicio de dicha representacin la
posicin jurdica propia del tradente, debiendo cumplir con las obligaciones que le impone
la ley, entre las que se encuentra la de hacer la entrega o tradicin de la cosa vendida, sin
perjuicio de lo cual es dable reflexionar que el ejercicio de dicha representacin no es
ilimitado y que, habiendo efectuado aqul la entrega jurdica del inmueble al comprador,
no resulta razonable ni aceptable que el vendedor justifique, ahora, su negativa a entregar
materialmente el bien o soslaye su propia responsabilidad al efecto, en un supuesto
incumplimiento del aludido funcionario, pues sus afirmaciones sobre el particular
contravienen, entre otros, los principios de la buena fe y el acto propio sobre los cuales
descansa el derecho en general;
365
Por estas consideraciones y visto, adems, lo dispuesto en las normas legales citadas y
en los artculos 765 y 767 del Cdigo de Procedimiento Civil, se rechaza el recurso de
casacin en el fondo interpuesto en la peticin principal contenida en la presentacin de
fojas 181, por el abogado don Jos Manuel Muoz Guzmn, en representacin del
demandado, don Pedro Pino Rodrguez, en contra de la sentencia de trece de marzo de
dos mil ocho, escrita a fojas 175.
N 2161-08.-.
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema por los Ministros Sres. Milton Juica
A., Sergio Muoz G., Sra. Margarita Herreros M. y Sr. Juan Araya E. y Abogado
Integrante Sra. Gmez de la Torre V. Autorizado por la Secretaria Sra. Rosa Mara Pinto
Egusquiza.
366
Tema Clave
Tribunal
Considerando
C. Suprema
Buena Fe objetiva.
C. Suprema
31.
Promesa.
C. Suprema
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
367
Lo reseado haca verosmil que el acto al cual estaba concurriendo el actor era correcto
y otorgaba a l una apariencia de legitimidad, que un tercero de buena fe dificultosamente
pudo poner en duda.
368
Por otra parte, y siempre dentro del derecho privado, se encuentran causas de apariencia
en aquellas relaciones en que han intervenido sujetos con titularidad, capacidad o
cualidades aparentes, que le dan legitimidad a sus actuaciones sustentadas en el hecho
propio de quien poda reclamar de ella en situaciones similares.
369
Ahora bien, como se dijo ms arriba se prob que esta persona actu, en los hechos,
como apoderado de esta sociedad demandada, validando con ello una apariencia jurdica
que responsabiliza a esta ltima subjetiva y objetivamente de los efectos de los contratos
de promesa de compraventa que sirven de fundamento a la accin de autos.
Por lo que se relata necesariamente debe afirmarse que el fallo censurado no ha incurrido
en yerro de derecho alguno al concluir la existencia de los contratos de promesa aludidos
y que en ellos son parte la demandada y las actoras, como promitentes vendedoras y
compradoras, respectivamente.
Nada obstara que la exigencia del artculo 1554 citado se cumpliera si en el caso de que
se trata se combinara un plazo con una condicin.
entendido que la promesa es esencialmente transitoria y que tiene por objeto dar lugar al
contrato definitivo y de esta forma tambin lo ha entendido la jurisprudencia de nuestros
tribunales al indicar: "En el caso de que las partes fijen una condicin, es requisito
esencial que sta sea adecuada, esto es, que sirva en forma efectiva al objeto; sin que
pueda sostenerse que un contrato de promesa slo es vlido cuando contenga una
condicin determinada. Lo que la ley exige es que pueda saberse con certeza la fecha
desde la cual podr el acreedor hacer efectiva la obligacin de hacer que se deriva de la
promesa o cundo ha de estarse cierto que no podr verificarse, sea que haya vencido o
no el plazo estipulado, sea que se ha cumplido o llegado a ser cierto que la condicin no
se realizara." (Corte de Valparaso, 12 de julio 1963. Repertorio Cdigo Civil y Leyes
Complementarias Tomo V, Tercera Edicin Actualizada, 1997. Pgina 329).
REGLA
a.- El principio de buena fe que rige las actuaciones de las partes en materia de
373
Lo reseado haca verosmil que el acto al cual estaba concurriendo el actor era correcto
y otorgaba a l una apariencia de legitimidad, que un tercero de buena fe dificultosamente
pudo poner en duda.
c.- En las manifestaciones de la vida jurdica, al igual que en otros dominios, no siempre la
realidad concuerda con las apariencias. Frente a la dualidad de apariencia y realidad
surge el deseo de proteger a los terceros. Las apariencias merecen fe, por cuanto resulta
difcil precisar si ellas corresponden o no a la realidad. Es as que cuando el inters de los
terceros de buena fe lo hace necesario, los jueces no deben considerar totalmente
ineficaz un acto ejecutado por quien se ha comportado como titular verdadero del derecho
y lo hace oponible al titular real.
d.- El principio de la buena fe, en su fase objetiva, est constituido por la conducta que se
puede esperar de un hombre correcto. Es un estndar que debe ser apreciado en
abstracto, contrariamente a lo que ocurre con la buena fe subjetiva, la cual es ponderada
en concreto.
374
f.- Nada obsta que la exigencia del artculo 1554 citado se cumpliera si se combinara un
plazo con una condicin.
375
Que si se analiza el segundo planteamiento formulado por la recurrente, esto es, que el
contrato tambin se encontrara condicionado a que la promitente compradora pagara el
saldo del precio adeudado, se arriba a idntica conclusin que la que ha quedado
consignado en el motivo precedente. Empero tal estipulacin no da cuenta, en ningn
caso, de una condicin que fije la poca de la celebracin del contrato como exige el
artculo 1554.
CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 13 Agosto 2009. M.J. N 20092.
inexistente ese contrato o al menos les resta todo valor probatorio, es decir, no constituye
contrato de promesa de compraventa, y si no lo es no se entiende que pueda darse por
establecida la existencia de una promesa que no existe.Sostiene que de otro lado, la sentencia elimin el motivo dcimo sexto del fallo de primer
grado que se refera a la prueba pericial, respecto de la cual no contiene consideracin
alguna ni para aceptarla ni para prescindir de la misma y menos para valorarla. Afirma
que, si bien la prueba pericial se aprecia de acuerdo a las reglas de la sana crtica, no es
menos cierto que siendo ella un medio de prueba aceptado por la ley el fallo no puede
prescindir de sta sin indicar las razones que tiene para descartarla y especialmente est
obligada a consignar las mximas de la experiencia, principios de la lgica y
conocimientos cientficos suficientemente afianzados que la llevan a restarle valor. Agrega
que no se comprende, si no existe promesa, que la sentencia discurra respecto de un
mandato tambin inexistente.
TERCERO: Que al desarrollar el vicio contemplado en el nmero cuatro del artculo citado
del Cdigo de Procedimiento Civil, hace presente la demandada, que la nulidad que se
declar no ha sido objeto de la demanda y, por consiguiente, no form parte de la
controversia, lo que obliga a determinar si estamos o no en la excepcional hiptesis que
faculta al tribunal para declararla de oficio, es decir, que aparezca de manifiesto en el acto
o contrato.
Concluye que en este caso la causal de ultra petita concurre sin duda, toda vez que no
existe el vicio de nulidad, sin perjuicio de la inoponibilidad del contrato. Aade que la
sentencia impugnada deja establecido un hecho que no es real puesto que al documento
al que erradamente le atribuye el rol de promesa, s contienen un plazo o condicin.
Agrega que si se analiza su texto en su conjunto y en forma armnica se puede constatar
que quien aparece como promitente vendedora -que no es la demandada- sera duea de
un predio en el cual construira un conjunto habitacional donde el promitente comprador
adquirira una vivienda para cuyo efecto la primera debera construirla en el plazo de 180
das hbiles de obtenido el permiso de edificacin; la compraventa prometida se
celebrara una vez pagado el saldo de precio al momento de firmar la escritura de
compraventa y la entrega sera pagado que fuere el precio al firmar la escritura prometida
celebrar. Concluye que de lo anterior resulta que la compraventa qued sujeta a varias
condiciones: a) que la promitente vendedora construyera la vivienda para lo cual
disponan del plazo mencionado y b) que el promitente comprador pagara el saldo del
precio adeudado. Anota que, por consiguiente, el contrato prometido qued sujeto a dos
condiciones que fijan suficientemente la poca del contrato, pues ste debera haberse
otorgado una vez construidas las viviendas y pagado el saldo de precio, o sea, construida
que fuere la vivienda en el plazo estipulado y pagado que fuese el saldo de precio, la
compraventa sera perfectamente exigible, lo que cumple a cabalidad el presupuesto del
numeral tercero del artculo 1554 del Cdigo Civil, razn por la cual, estima, no existe el
vicio y menos el mismo aparece de manifiesto en el acto contrato.
Dice que por lo anterior es evidente que la sentencia incurre en el vicio de ultra petita al
pronunciarse sobre una materia ajena a la controversia y sin que se cumpliera con el
requisito legal que la autorizara para declarar la nulidad de oficio
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CUARTO: Que finalmente, en relacin con la causal de casacin del Nro. 6 del artculo
768 del Cdigo de Enjuiciamiento Civil, a saber, haber sido dada la sentencia contra otra
pasada en autoridad de cosa juzgada, arguye la recurrente que la resolucin que hizo
lugar a la objecin de documentos por falsedad, se encuentra firme o ejecutoriada y
constituye una sentencia interlocutoria que produce el efecto de cosa juzgada, razn por
la cual el tribunal vulnera el artculo 175 del Cdigo de Procedimiento Civil, en el
raciocinio sexto, al dar por configurada la existencia de un contrato que una sentencia
ejecutoriada dictada en el mismo juicio haba declarado objetado por falso y que como
consecuencia de ello careca de todo mrito probatorio.
QUINTO: Que del tenor de la demanda interpuesta en autos se observa que en ella se
solicita por el actor se declare la obligacin de la demandada de cumplir lo pactado en el
contrato privado de promesa celebrado con fecha 27 de agosto de 2001, en el sentido de
vender y entregar las viviendas ubicadas en los lotes 19 y 20, ambos de la Manzana 6 del
Conjunto Habitacional denominado Villa Doa Ester III 2 Etapa, segn plano N 90
archivado en el Conservador de Bienes Races de San Fernando del ao 2002, de
acuerdo a las condiciones pactadas en el referido contrato. Igualmente pide de disponga
que la demandada debe indemnizarle los perjuicios ocasionados cuya determinacin, en
especie, monto y prueba, se reservan para la ejecucin del fallo definitivo.
379
Constructora Malpo Ltda., es nulo absolutamente, por haberse omitido un requisito que la
ley prescribe en consideracin a la naturaleza del mismo, para su validez.
Como consecuencia de la nulidad declarada, dispone que las cosas deben retrotraerse al
estado anterior a la celebracin del contrato de promesa declarado nulo, debiendo ser
restituidas las partes al mismo estado en que se hallaran de no haber existido el contrato
de promesa de compraventa, respecto del cual se ha declarado su nulidad absoluta y; una
vez que quede ejecutoriada la presente sentencia la demandada Constructora Malpo
Limitada debe restituir al demandante Jos Manuel Olivares Clavijo la suma de $
6.159.633.-, con ms los intereses corrientes para operaciones no reajustables entre la
fecha del fallo y aquella en que se verifique el pago.
OCTAVO: Que en cuanto a la primera causal de nulidad formal hecha valer por la
demandada, estatuida en el N1 del artculo 768 del Cdigo de Procedimiento Civil,
consistente en haber sido pronunciada la sentencia por un tribunal incompetente, resulta
que aquel vicio se ha erigido por la recurrente esencialmente sobre la base de considerar
que, por ser falso el contrato que fundan la demanda, no le son aplicables sus clusulas y,
por ende, aqulla en virtud de la cual prorrogan la competencia, razn por la que debiera
concurrirse al tribunal correspondiente al domicilio del demandado que se encuentra en
Talca. Empero, la recurrente intenta desconocer que, adems de las oficinas centrales en
la ciudad de Talca, la Constructora Malpo Ltda., presenta domicilio en San Fernando,
cuestin sta que aparece corroborada desde que no ha sido discutido que la demandada
era duea del inmueble donde se sitan las propiedades que fueron objeto de los
contratos de promesa de compraventa materia de este litigio, lo que tambin se verifica
con el instrumento acompaado a fojas 48 de estos autos.
NOVENO: Que sentado lo anterior corresponde, entonces, dilucidar cul es el tribunal
competente para conocer de este negocio civil, en el que la demandada es una persona
jurdica que tiene pluralidad de domicilios.
El artculo 142 en su primer inciso dispone que si el demandado fuere una persona
jurdica, se tendr por domicilio, para el objeto de fijar la competencia del juez, el lugar
donde tenga su asiento la respectiva corporacin o fundacin. El inciso segundo
precepta por su parte que "si la persona jurdica demandada tuviere establecimientos,
comisiones u oficinas que la representen en diversos lugares, como sucede con las
sociedades comerciales, deber ser demandada ante el juez del lugar donde exista el
establecimiento, comisin u oficina que celebr el contrato o que intervino en el hecho que
da origen al juicio."
De acuerdo al Diccionario de la Lengua Espaola, "oficina" es el sitio donde se hace, se
ordena o trabaja una cosa. Departamento donde trabajan los empleados pblicos o
particulares. Laboratorio de farmacia. Parte o paraje donde se fragua y dispone una cosa
no material. "Comisin" se define como "orden y facultad que una persona da por escrito a
otra para que ejecute algn encargo o entienda en algn negocio. Tambin significa
"encargo que una persona da a otra para que haga alguna cosa", "conjunto de personas
encargadas por una corporacin o autoridad para entender en algn asunto" y "mandato
conferido al comisionista, sea o no dependiente del que le apodera." Es oportuno tener en
cuenta que de acuerdo a la misma fuente citada, "comisionar" significa "dar comisin a
una o ms personas para entender en algn negocio o encargo" y, a su vez, "comisionista
" es la "persona que se emplea en desempear comisiones mercantiles." La voz
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que armoniza con el sentido del texto legal, " oficina o despacho del agente", "empresa
destinada a gestionar asuntos ajenos o a prestar determinados servicios", "sucursal o
delegacin subordinada de una empresa". "Sucursal" es, de acuerdo al Diccionario, "el
establecimiento que, situado en distinto lugar que la central de la cual depende,
desempea las mismas funciones que sta."
UNDCIMO: Que, de acuerdo al inciso 1. del artculo 142, se reputa -para los efectos de
fijar la competencia del juez- por domicilio de la persona jurdica el lugar donde ella tenga
su "asiento", esto es, donde se halla establecida; de acuerdo al inciso 2 del precepto, si
la persona jurdica tiene varios lugares que le sirven de "asiento", es decir, de
establecimiento, como ocurre con las sociedades comerciales, el juez competente es el
del lugar donde a travs de una agencia o sucursal tiene "asiento" la sociedad.
Los especialistas en el tema "personas jurdicas", sealan que al igual que la persona
fsica, la persona jurdica debe ser necesariamente localizada en un lugar determinado.
En este sentido, las normas que determinan el domicilio de las personas fsicas (arts.
59 al 73 del Cdigo Civil) resultan igualmente tiles, "aunque requieren de cierta
adaptacin, pues slo fueron pensadas para serle aplicadas al hombre de carne y hueso."
(Alberto Lyon Puelma, Personas Jurdicas, Ediciones U. Catlica de Chile, 2003, pg.56)
Precisa este autor que la sede estatutaria de la persona jurdica no fija el domicilio legal
de la misma sino en cuanto corresponde realmente a su sede efectiva. El haber
domiciliado a la sociedad en un lugar distinto a la sede fijada en los estatutos constituye
ms bien una violacin o transgresin de stos, de lo cual podran ser responsabilizados
los administradores. "Todo lo cual conduce a concluir, entonces, que las normas de los
artculos 59 y siguientes del Cdigo Civil son ntegramente aplicables a las personas
jurdicas con total independencia de cual sea su sede estatutaria." (Lyon Puelma, op. cit.,
pg. 57)
A propsito del domicilio de las personas jurdicas, Alessandri Rodrguez y Somarriva
Undurraga apuntan que el domicilio de las personas jurdicas es el que sealan sus
estatutos. Si stos nada dicen, se entiende que es el asiento principal, esto es, el lugar
donde se halle la sede principal de los negocios o intereses; como nuestra legislacin
admite la pluralidad de domicilio, es indudable que las personas jurdicas pueden tener
varios, constituidos por sucursales o agencias que posean los caracteres de domicilio.
(Derecho Civil, Parte General, T.II, Quinta Edicin, 1990, pg. 572). Luis Claro Solar
establece que las corporaciones, por el propio fin que persiguen, pueden tener slo una
sede o casa social, y tendrn su domicilio en ese mismo lugar, pero bien pueden extender
su accin a otros lugares, disponiendo en ellos otros establecimientos o sucursales o
agencias; "y si estas nuevas casas renen las condiciones de permanencia caractersticas
del domicilio, podrn adquirir domicilio en esos lugares para los negocios que en ellas
traten". (Explicaciones de Derecho Civil Chileno y Comparado, T. V, pg. 533). Por su
parte Antonio Vodanovic indica que "Se ha estimado que la disposicin del Cdigo Civil
(art. 67) sobre pluralidad de domicilios es aplicable a las personas jurdicas,
especialmente si tienen agencias o sucursales. Por tanto, si concurren en varias
secciones territoriales circunstancias constitutivas de domicilio civil, se entender que en
todas ellas lo tiene." (Manual De Derecho Civil. Tomo I Parte Preliminar y General pg.
176).
DCIMO SEGUNDO: Que, en la especie, la recurrente afirma que tiene su domicilio en
Talca, ciudad en la cual efectivamente y segn sus estatutos sociales acompaados, la
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que antecede. Sentado lo anterior aparece que el mayor anlisis que pretende la
reclamante solo dice relacin con las argumentaciones y conclusiones que conforman el
planteamiento que ella ha postulado, lo que importa, consecuencialmente, que sus
alegaciones constituyen mas bien una crtica - tanto a las motivaciones contenidas en el
fallo como, asimismo, respecto a la forma como se valor la prueba aportada - y no
propiamente una fundamentacin dirigida a comprobar y demostrar una o ms
inadvertencias, motivo por la cual no puede colegirse el error denunciado. Finalmente
debe asimismo hacerse presente que si bien la recurrente hace ver la falta de
fundamentacin jurdica en el fallo censurado, tal reproche no se apoya propiamente en la
carencia de sustentacin en ese sentido, no obstante lo cual procede advertir que de la
simple lectura de la sentencia se aprecia la remisin a las disposiciones legales sobre las
cuales basa su decisin, cumpliendo as con la exigencia impuesta por el legislador al
efecto.
De este modo, del anlisis de la sentencia que se censura se comprueba que sta rene
todas y cada una de las exigencias a que menciona el artculo 170 del Cdigo de
Enjuiciamiento Civil, especialmente aquella signada en el Nro. 4 de la disposicin aludida
y que la demandada echa de menos, por lo que necesariamente ha de concluirse que
sta no adolece de la causal de anulacin en comento.
DCIMO QUINTO: Que hacindose cargo de la causal de nulidad prevista en el Nro. 4 del
artculo 768 del Cdigo de Procedimiento Civil - que tambin denuncia la demandada "
procede consignar que el vicio a que aquella norma se refiere no encuadra en los
presupuestos fcticos que esgrime la recurrente en su recurso, toda vez que la ultra petita
consiste en haberse extendido la sentencia a puntos no sometidos a la decisin del
tribunal, esto es, como se ha dicho reiteradamente por esta Corte, cuando apartndose de
los trminos en que las partes situaron la controversia por medio de sus respectivas
acciones o excepciones, altera el contenido de stas cambiando su objeto o modificando
su causa de pedir, debiendo ello, adems, decir relacin con la parte dispositiva de la
sentencia impugnada. Tal circunstancia no se advierte concurra en este caso, desde que
al pronunciarse el tribunal de alzada declarando la nulidad absoluta de los contratos de
promesa de compraventa que eran objeto del pleito "an cuando tal decisin no hubiere
sido consecuencia de una solicitud expresa de las partes ni motivo de alegacin en sus
escritos fundamentales "obraron dentro del mbito de las atribuciones que la propia ley le
otorga. En efecto, una vez que los jueces del fondo tuvieron por establecida la
inconcurrencia de un requisito esencial del contrato, que estimaron manifiesta, y cuya
omisin se sanciona con la nulidad absoluta del mismo estaban facultados para realizar
tal declaracin de oficio, de conformidad con lo que prescribe la primera parte del artculo
1683 del Cdigo Civil: "La nulidad absoluta puede y debe ser declarada por el juez, aun
sin peticin de parte, cuando aparece de manifiesto en el acto o contrato;". Esto, con
independencia de los argumentos que los hayan hecho devenir en esa determinacin, los
cuales, por cierto, no corresponde sean revisados a partir de la invocacin de este vicio
de nulidad procesal.
De manera que, por haber obrado dentro de sus potestades y no haberse,
consecuencialmente, extendido la sentencia a puntos no sometidos a su decisin - al
contrario de lo sostenido por la recurrente - el vicio de ultra petita que se denuncia no se
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contiene la entrega o promesa de una cosa que valga ms de dos unidades tributarias
mensuales.
Hace presente que una cosa es que la actividad de la construccin sea un acto de
comercio y otra distinta es que el mandato que se otorgue a una persona sea para
suscribir un acto no mercantil, como es la promesa de compraventa de un bien raz, que
debe necesariamente cumplir con los requisitos exigidos en consideracin al acto.
Indica que en este aspecto la sentencia incurre en un nuevo error al dar por establecida la
existencia de un mandato mercantil entre su parte y Rolando Silva Martnez sobre la base
del giro social de la demandada.
Menciona que el fallo, por otra parte, olvida la norma contenida en el artculo 325 del
Cdigo de Comercio, que previene que en los casos que los dependientes contraten a
nombre de sus comitentes, "expresarn en la antefirma de los documentos que otorgaren
que los suscriben por poder", de lo cual desprende que este razonamiento del fallo
tampoco se ajusta a derecho, puesto que en el supuesto contrato de promesa no figura
como compareciente el eventual mandatario y tampoco en parte alguna del mismo se
cumple con la exigencia legal anotada. Concluye que por consiguiente, tanto desde el
punto de vista de las exigencias legales y probatorias que impone el artculo 1554 N 1 en
relacin con el artculo 2123, ambos del Cdigo Civil, la sentencia recurrida no pudo tener
por acreditada la existencia de un contrato de mandato, sea civil o mercantil, a un
mandatario que adems falsific las firmas de los supuestos mandantes, hecho
reconocido en la causa.
Se aade que la sentencia infringe las normas contempladas en los artculos 1708, 1709 y
1710 del Cdigo Civil, en relacin con el artculo 1711 del citado conjunto normativo,
normas que son leyes reguladoras de la prueba documental, y establecen la imposibilidad
de justificar la existencia del mandato mediante testigos. En efecto, intenta dar por
establecido el mandato sobre la base de la existencia de un principio de prueba por
escrito, sin embargo, para que un instrumento privado o pblico constituya un principio de
prueba por escrito se requiere que los documentos hayan sido reconocidos por la persona
contra la cual se oponen o se haya mandado tenerlos por reconocidos en su contra.
Agrega que se necesita, adems, que haya una estrecha relacin y coherencia entre los
documentos y la obligacin que se trata de probar.
En el caso de autos los documentos a que hace referencia la sentencia recurrida,
contrariamente a lo que sostienen los sentenciadores en el motivo octavo, s fueron
objetados como consta a fojas 99 en la presentacin de 23 de mayo de 2003 y no han
sido reconocidos ni mandados tener por reconocidos por ningn representante de la
demandada. Tambin dice que no existe relacin alguna entre tales documentos y la
supuesta existencia de un mandato a una persona respecto de la cual s se encuentra
acreditado que falsific las firmas de la sociedad que representa y que, en este sentido, la
sentencia tambin infringe las leyes reguladoras de la prueba, particularmente los
artculos 409 y siguientes del Cdigo de Procedimiento Civil y el artculo "1425" (sic) del
citado cuerpo legal en relacin con los artculos 1427 y 1554 del Cdigo Civil, en cuanto la
sentencia no le ha dado valor probatorio al informe emanado del perito que dej
388
Luego, los jueces del fondo son soberanos para apreciar las probanzas, dentro del marco
establecido por las normas pertinentes. Por ello, no son susceptibles de ser revisadas por
la va de la casacin las decisiones de los sentenciadores basadas en disposiciones que
le otorgan libertad en la justipreciacin de los diversos elementos probatorios.
VIGSIMO: Que de este modo, la justificacin de la verdad de los hechos controvertidos
en un juicio corresponde hacerlo en la forma que lo dispone el legislador, motivo por el
cual ha de resolverse inicialmente si " de acuerdo con lo anotado con antelacin " a las
normas que el recurrente indica se le puede atribuir el carcter de reguladoras de la
prueba y, en tal evento, si han sido conculcadas como ste pretende.
VIGSIMO PRIMERO: Que en cuanto se denuncia la transgresin al artculo 1702 del
Cdigo Civil, resulta que la eficacia de este precepto como norma reguladora de la prueba
est en directa relacin con lo que estatuye el artculo 1700 de este mismo cuerpo legal,
norma esta ltima que no se denunci como vulnerada, de modo que su sola mencin no
sirve para desvirtuar los hechos de la manera como fueron determinados por los jueces
del fondo.
VIGSIMO SEGUNDO: Que por su parte, en referencia al artculo 1698 del Cdigo
sustantivo, resulta que esta disposicin legal, como insistentemente lo ha sealado esta
Corte, slo contiene la norma bsica de nuestro derecho positivo relacionada con la
distribucin de la carga probatoria. No obstante ello, del tenor del libelo en anlisis se
constata que la recurrente pretende construir la infraccin a tal norma, sobre la base de
postular que el fallo impugnado ha tenido como instrumentos privados reconocidos
aqullos declarados falsos, al ser objetados por falsedad, y tambin ha considerado como
medio de prueba instrumentos privados que no se han tenido por reconocidos, razn por
la cual estima que, de esta forma se ha aceptado como medios de prueba y se le ha
atribuido valor probatorio a instrumentos que no lo tienen. De lo anterior aparece que la
demandada ms propiamente est atacando la valoracin que los jueces del grado,
dentro del mbito de sus potestades, han realizado de tales probanzas, que la equivocada
aplicacin del precepto indicado. En efecto, no puede existir infraccin de aquella norma
cuando los sentenciadores ponderan la prueba rendida para fijar los presupuestos fcticos
del proceso, como lo han hecho en la decisin que se critica, motivo por el cual el
reproche no puede aceptarse.
VIGSIMO TERCERO: Que a su vez, la recurrente plantea la transgresin de las
disposiciones antedichas, en vinculacin con el artculo 346 del Cdigo de Procedimiento
Civil, empero, de acuerdo con lo expuesto en el motivo vigsimo primero que precede,
resulta axiomtico concluir que tal precepto slo indica pautas procesales para establecer
el reconocimiento de los documentos privados presentados al juicio, encontrndose su
valoracin contenida en normas del Cdigo Civil que no son denunciadas como
vulneradas. De manera que se trata de una norma de carcter ordenatoria litis, razn por
la cual an cuando existiera la infraccin alegada, no puede servir de base para la
interposicin de un recurso de casacin en el fondo.
VIGSIMO CUARTO: Que en relacin con la referencia efectuada por la recurrente a los
artculos 409 y siguientes del Cdigo de Enjuiciamiento Civil, procede consignar,
primeramente, que esta disposicin, al igual que aqulla analizada con antelacin,
tambin da cuenta de una norma que se limita a regular un aspecto puramente formal
relacionado con el desarrollo del juicio, careciendo en consecuencia, de las propiedades
390
caractersticas de las reglas reguladora de la prueba, toda vez que restringe su contenido
a sealar los casos en los cuales se oir informe de peritos. Lo anotado impide que sea
utilizada para sustentar la nulidad impetrada.
Por otra parte, procede expresar que a esta Corte no le corresponde hacerse cargo de la
alusin realizada por la demandada en el libelo de nulidad en cuanto refiere una supuesta
vulneracin de "los siguientes" artculos, haciendo mencin a aquellos que continan a
partir del citado artculo 409, desde que, por decir relacin el recurso en estudio con una
impugnacin de derecho estricto, era deber de la recurrente sindicar, no slo con
determinacin las leyes que considera infringidas sino que, adems, explicitar el modo
como se ha producido tal quebrantamiento. Lo anterior sin perjuicio de la obligacin
adicional en orden a revelar la forma en que aquella violacin habra influido
sustancialmente en lo dispositivo del fallo. Exigencias todas estas que no pueden
verificarse con una mera remisin como aquella que se ha transcrito, y que se ha
planteado en la especie en trminos absolutamente genricos.
VIGSIMO QUINTO: Que en lo relativo a la alteracin del valor de la prueba pericial que
postula la recurrente, corresponde sealar, de manera previa, que el artculo 425 del
Cdigo de Procedimiento Civil dispone: "Los tribunales apreciarn la fuerza probatoria del
dictamen de peritos en conformidad a las reglas de la sana crtica", esto es, conforme a
las reglas del correcto entendimiento, contingentes y variables, con relacin a la
experiencia del tiempo y del lugar, que son estables y permanentes en cuanto a los
principios lgicos en que debe apoyarse la sentencia, segn lo ensea Eduardo Couture,
y que nuestro legislador ha indicado corresponde a las razones jurdicas y las
simplemente lgicas, cientficas, tcnicas o de experiencia en cuya virtud les asigne valor
a las pruebas o las desestime. Es la ley la que ordena al juez la forma como apreciar la
prueba "pudiendo, por ende, dar o no dar valor probatorio a estos medios", razonando
conforme a las reglas de la lgica y mximas de experiencia (Juan Colombo), motivo por
el cual queda dentro de lo que se denomina prueba judicial y no legal, permitiendo su
revisin por la va del recurso de apelacin, pero no por la casacin en el fondo, en
atencin a que dicha actividad, por la libertad y naturaleza de los parmetros que se
entregan al juez, impiden que se incurra en error de derecho. Por lo reflexionado, no
corresponde decidir si, en el presente caso, se aplicaron correctamente las reglas de la
sana crtica al apreciar la prueba pericial.
VIGSIMO SEXTO: Que de otro lado, hacindose cargo esta Corte de la infraccin a las
normas contenidas en los artculos 1708,1709, 1710, todas en relacin con el artculo
1711 del Cdigo Civil, corresponde tener en consideracin que si bien el fallo censurado
se remite a ellas y les da aplicacin, no incurre en transgresin alguna desde que
precisamente lo hace por estimar que en el caso de marras existe un principio de prueba
por escrito - que resea y analiza - y en virtud de cuyo germen resulta procedente
acreditar con testigos una obligacin de aqullas a que se refiere el artculo 1709 del
citado cuerpo normativo. Determinacin sta alcanzada, a su vez, luego de efectuar una
labor de apreciacin privativa por parte del tribunal respecto del contenido de todos los
medios de prueba aportados.
Es dable tener adems en consideracin que, en todo caso, la invocacin de tales
preceptos por los falladores ha sido en carcter subsidiario y con el objeto de dar mayor
391
fuerza a su decisin, puesto que el argumento principal por el cual determinan escuchar la
testimonial rendida en el proceso radica en la circunstancia que estiman que se est en
presencia de un mandato de ndole mercantil, por lo que aplican, en primer trmino, el
artculo 128 del Cdigo de Comercio que estatuye que: "La prueba de testigos es
admisible en los negocios mercantiles cualquiera que sea la cantidad que importe la
obligacin que se trate de probar, salvo los casos en que la ley exija escritura pblica.".
Solo luego de sentado lo manifestado aaden los jueces que, an cuando se considera
que se trata de un mandato civil, de todos modos su existencia la tienen por demostrada
con las probanzas que resean y la cual, como se adelant, ponderaron de acuerdo a las
facultades que la ley les otorga.
VIGSIMO OCTAVO: Que del anlisis realizado en las reflexiones que anteceden se
puede concluir que los sentenciadores del grado no han incurrido en los yerros de
derecho que se han sealado - no han invertido el peso de la prueba, no han rechazado
pruebas que la ley admite ni han aceptado otras que la ley rechaza, ni han desconocido,
tampoco, el valor probatorio de las distintas probanzas producidas en autos circunstancia que impide revisar la actividad desarrollada por ellos en relacin a la prueba,
y variar, por este Tribunal de Casacin, los supuestos fcticos determinados y sobre los
cuales recay la aplicacin del derecho sustantivo.
VIGSIMO NOVENO: Que, por consiguiente y teniendo en cuanta lo colegido
precedentemente resultan ser hechos de la causa, que adquieren el carcter de
definitivos y, de acuerdo a los cuales corresponde resolver los dems errores de derecho
que se han reclamado, los siguientes:
1) Con fecha 27 de Agosto del ao 2001 el demandante, Jos Manuel Olivares Clavijo,
celebr con la demandada Empresa Constructora Malpo Limitada, un contrato de
promesa de compraventa referidos a las viviendas ubicadas en los lotes 19 y 20, ambos
de la Manzana 6 del Conjunto Habitacional denominado Villa Doa Ester III 2 Etapa, San
Fernando, en cuya clusula tercera se estipul que el precio de compraventa definitivo
ser la suma de 900 UF o su equivalente en moneda nacional al momento del pago
efectivo, que el promitente comprador se compromete a cancelar de la siguiente manera:
a) con un abono inicial de $3.600.000, que sern considerados parte integral de las 900
UF correspondientes al valor total de las viviendas que el promitente comprador cancelar
contra firma de escritura. A su vez en la clusula novena se pact que el plazo de
ejecucin de las obras ser de 180 das hbiles a contar de la fecha de obtener el permiso
de edificacin, sin perjuicio de ampliar este plazo en el tiempo que le sea posible, por
causales no imputables a la empresa.
2) En la suscripcin de los contratos de promesa sealados obr el seor Rolando David
Silva Martnez por la Empresa Malpo Limitada.
3) El actor entreg a la demandada la cantidad de $6.159.133, en diversas partidas de
dinero a ttulo de anticipo del precio de la compraventa prometida, suscribiendo Rolando
David Silva Martnez los recibos de dinero que dan cuenta de dicha solucin, en
representacin de la demandada, en San Fernando. Asimismo, no ha sido controvertido
en esta causa que entre la demandada y Rolando David Silva Martnez exista un contrato
de trabajo y que aqul desempeaba sus labores como jefe zonal de San Fernando en la
oficina que tal empresa tena en el inmueble donde se encontraban los bienes objeto de
los contratos indicados.
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deben ejecutarse de buena fe y agrega, incluso, que, por consiguiente, obligan no slo a
lo que en ellos se expresa, sino a todas las cosas que emanan precisamente de la
naturaleza de la obligacin, o que por la ley o la costumbre pertenecen a ella.
Por lo que se relata necesariamente debe afirmarse que el fallo censurado no ha incurrido
en yerro de derecho alguno al concluir la existencia de los contratos de promesa aludidos
y que en ellos son parte la demandada y las actoras, como promitentes vendedoras y
compradoras, respectivamente.
TRIGSIMO SEXTO: Que sentado lo anterior y continuando con el razonamiento,
corresponde dilucidar si en el referido contrato de promesa se ha cumplido con las
exigencias legales que permitan otorgarle validez.
Para esto conviene precisar que el contrato de promesa de compraventa surge en
aquellos casos en que se desea celebrar el contrato definitivo, empero, faltan algunos
requisitos para que aqul surta pleno efecto o, por alguna razn, no puede convenirse de
inmediato como podra ser el caso de la compraventa de cosas futuras a que se refiere el
artculo 1813 del Cdigo Civil, o que el dueo del terreno en que se va a construir, lo
enajenara de inmediato al adquirente, con lo cual ste asegura desde ya el dominio.
Este contrato preparatorio celebrado les confiere a las partes la certeza y la cierta
garanta para que el contrato que prometen celebrar llegue a materializarse si se cumplen
las obligaciones que de l emanan, ya sea en forma voluntaria o por el ministerio de la
justicia. Este contrato preparatorio se encuentra reglamentado en forma especial en el
artculo 1554 del Cdigo Civil, ubicado en el ttulo XII del Libro IV, al tratar el efecto de las
obligaciones de hacer. La jurisprudencia ha definido este tipo de convencin como "aquel
por el cual las partes se obligan a celebrar un contrato determinado, en cierto plazo o en
el evento de cierta condicin", debiendo agregarse, adems, que deben reunirse los
requisitos que contempla el precepto indicado. De acuerdo a lo anterior el hecho que
caracteriza a este contrato es que las partes se obligan a celebrar otro, en el futuro, que
es realmente el pretendido.
TRIGSIMO SEPTIMO: Que en la promesa se aplica la regla general de los contratos y,
por ende, se requiere consentimiento exento de vicios, capacidad para otorgarla, objeto y
causa lcitos. Adicionalmente el legislador limit a su respecto el consensualismo
sometiendo esta convencin a determinados presupuestos que deben cumplirse
simultnea y copulativamente para darle validez, es decir, la omisin de cualquiera de
ellos produce su nulidad. As, el artculo 1554 del Cdigo Civil estatuye: "La promesa de
celebrar un contrato no produce obligacin alguna; salvo que concurran las circunstancias
siguientes:
1.a Que la promesa conste por escrito;
2.a Que el contrato prometido no sea de aquellos que las leyes declaran ineficaces;
3.a Que la promesa contenga un plazo o condicin que fije la poca de la celebracin del
contrato;
4.a Que en ella se especifique de tal manera el contrato prometido, que slo falten para
que sea perfecto, la tradicin de la cosa, o las solemnida des que las leyes prescriban.
395
396
condicin determinada. Lo que la ley exige es que pueda saberse con certeza la fecha
desde la cual podr el acreedor hacer efectiva la obligacin de hacer que se deriva de la
promesa o cundo ha de estarse cierto que no podr verificarse, sea que haya vencido o
no el plazo estipulado, sea que se ha cumplido o llegado a ser cierto que la condicin no
se realizara." (Corte de Valparaso, 12 de julio 1963. Repertorio Cdigo Civil y Leyes
Complementarias Tomo V, Tercera Edicin Actualizada, 1997. Pgina 329).
"La frase inserta en la solicitud presentada por el promitente vendedor y el promitente
comprador a la Caja Nacional de Empleados Pblicos y Periodistas que dice
"entendindose que el plazo ser el que necesita la caja para su tramitacin", es una
condicin indeterminada, una condicin que depende exclusivamente de la voluntad de
aquella institucin, lo que no importa fijar poca para la celebracin del contrato
prometido. En consecuencia, infringe el N 3 del artculo 1554 del Cdigo Civil la
sentencia que acoge la demanda deducida por el promitente comprador para que se
declare que el promitente vendedor est obligado a venderle la propiedad a que tal
solicitud se refiere." (Repertorio cit. Pg. 331)
CUADRAGSIMO: Que si se analiza el segundo planteamiento formulado por la
recurrente, esto es, que el contrato tambin se encontrara condicionado a que la
promitente compradora pagara el saldo del precio adeudado, se arriba a idntica
conclusin que la que ha quedado consignado en el motivo precedente. Lo anterior por
cuanto, en primer lugar, no consta en parte alguna de la convencin que se haya
supeditado la suscripcin del contrato definitivo a la ocurrencia de tal acontecimiento, por
el contrario, del texto expreso de la clusula sexta de la promesa aparece que lo que ha
sido condicionada tanto al pago del precio, como a la suscripcin de la escritura definitiva
no es otra cosa que la entrega material de la propiedad; y, en segundo lugar, porque lo
convenido por las partes en relacin con los saldos del precio fue que stos seran
solucionados en una oportunidad determinada, cual era, el momento de firmar la escritura
de compraventa definitiva, empero tal estipulacin no da cuenta, en ningn caso, de una
condicin que fije la poca de la celebracin del contrato como exige el artculo 1554
tantas veces citado.
CUADRAGSIMO PRIMERO: Que de lo expuesto en las reflexiones que anteceden
resulta palmario que las partes no fijaron la poca de celebracin del contrato definitivo al
tenor de lo que prescribe la regla tercera del artculo 1554 del Cdigo Civil, conclusin de
la cual se deviene que en el caso sub-lite se ha incumplido con uno de los presupuestos
exigibles a este tipo de contratos, inadvertencia sta que conlleva indefectiblemente a una
sancin, debiendo tenerse en consideracin para tales efectos que el prrafo primero del
artculo 1554 del cdigo sustantivo estatuye expresamente que "La promesa de celebrar
un contrato no produce obligacin alguna; salvo que concurran las circunstancias
siguientes:"". En efecto, conforme a los trminos acordados, segn los hechos dados por
establecidos por los jueces de la instancia, de no estimarse jurdicamente inexistente la
condicin, en definitiva la obligacin sujeta a condicin por el contrato, est radicada en la
sola voluntad del deudor, en este caso la empresa constructora, de acuerdo a lo
expresado en el fundamento que antecede, por lo cual corresponde calificarla como una
condicin meramente potestativa que depende de la sola voluntad de quien se obliga,
evento en el cual no existe verdadera intencin de obligarse, circunstancia que determina
su nulidad, segn los claros trminos del inciso primero del artculo 1478 del Cdigo Civil.
398
399
modo alguno los principios de la lgica, las mximas de la experiencia y los conocimientos
cientficamente afianzados.
Regstrese y devulvase con sus agregados. Redaccin a cargo del Ministro Sr. Guillermo
Silva G.
N 3098-09.Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema por los Ministros Sres. Milton Juica
A., Sergio Muoz G., Sra. Margarita Herreros M., Sres. Juan Araya E. y Guillermo Silva G.
400
Tema Clave
Tribunal
Considerando
8. (S. de R.)
2.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
Sentencia de Reemplazo.
OCTAVO: Que aunque no hay precepto alguno que resuelva la cuestin de si uno de los
contratantes que no ha cumplido las obligaciones contradas puede o no solicitar la
resolucin de la promesa de venta en contra de la otra parte que tampoco ha dado
cumplimiento a las suyas, los jueces estn en el deber de juzgarla del modo que ms
conforme parezca al espritu general de la legislacin y a la equidad natural de acuerdo
con lo preceptuado en el N5 del artculo 170 del Cdigo de Procedimiento Civil. En
401
efecto, no parece justo ni equitativo dejar a las partes ligadas por un contrato que ambas
no quieren cumplir y que de hecho aparece as ineficaz por voluntad de las mismas.
Luego no pugna, por lo tanto, con la ndole y naturaleza de los principios jurdicos que
informan la accin resolutoria que ella se acoja en este caso, porque la resolucin, es
precisamente el medio que la ley otorga para romper un contrato que naci a la vida del
derecho, pero que no est llamado a producir sus naturales consecuencias en razn de
que las partes se niegan a respetarlo y todava, porque acogindola se llega a la realidad
propia de toda resolucin, cual es que las cosas puedan restituirse al estado anterior,
como si el contrato no hubiese existido. Sin embargo no procede la indemnizacin de
perjuicios pedida pues ella requiere de mora y en este caso no podra existir para ninguna
de las partes de conformidad con lo dispuesto en el artculo 1552 del citado Cdigo Civil.
3.
REGLA .
a.- Aunque no hay precepto alguno que resuelva la cuestin de si uno de los contratantes
que no ha cumplido las obligaciones contradas puede o no solicitar la resolucin de la
promesa de venta en contra de la otra parte que tampoco ha dado cumplimiento a las
suyas, no parece justo ni equitativo dejar a las partes ligadas por un contrato que ambas
no quieren cumplir y que de hecho aparece as ineficaz por voluntad de las mismas.
Luego no pugna, por lo tanto, con la ndole y naturaleza de los principios jurdicos que
informan la accin resolutoria que ella se acoja en este caso, porque la resolucin, es
precisamente el medio que la ley otorga para romper un contrato que naci a la vida del
derecho, pero que no est llamado a producir sus naturales consecuencias en razn de
que las partes se niegan a respetarlo y todava, porque acogindola se llega a la realidad
propia de toda resolucin, cual es que las cosas puedan restituirse al estado anterior,
como si el contrato no hubiese existido.
4.
CITA DE FUENTE.
402
Corte Suprema
Fallo:
VISTOS:
En estos autos Rol N 4209-2001 del Vigsimo Primer Juzgado Civil de Santiago sobre
resolucin de un contrato de promesa de compraventa de bien raz caratulados "Parra
Riffo Hctor con Rafide Morales Juan Antonio", se dedujo demanda por el primero de los
nombrados, con el fin de obtener se declare resuelta la convencin suscrita con fecha 23
de Febrero de 2001, que recay sobre el inmueble que corresponde a departamento N
131, la bodega N 50 y el derecho de uso y goce del estacionamiento N 9 del Edificio
denominado Diego de Deza, construido en calles Martn Alonso Pinzn N 5556, Diego de
Deza N 1159 y 1139 de la comuna de Las Condes.
Por sentencia de tres de marzo de dos mil tres, escrita a fojas 111, el Juez Titular del
referido tribunal acogi la demanda principal, negando lugar a la reconvencional,
declarando resuelto el contrato de promesa de compraventa ordenando el pago de $
5.000.000 a ttulo de indemnizacin de perjuicios, cantidad convenida en la clusula
sptima del contrato y la restitucin de las 316 Unidades de Fomento pagadas por el
promitente comprador en su equivalente en pesos a la fecha del pago efectivo. Deducidos
recursos de casacin en la forma y apelacin por la demandada, una de las Salas de la
Corte de Apelaciones de Santiago por sentencia de dieciocho de enero de dos mil ocho,
que se lee a fojas 179 y siguientes, rechaz el recurso de casacin y confirm, con
costas, la sentencia de primera instancia.
CONSIDERANDO:
PRIMERO: Que en el recurso de casacin en la forma se invoca la causal del artculo 768
N5, en relacin con los numerales 4, 5 y 6 del artculo 170 ambos del Cdigo de
Procedimiento Civil. Indica que la sentencia impugnada omite las necesarias y obligatorias
menciones a que alude el ltimo de los artculos citados, en efecto, prescinde de las
consideraciones de hecho y derecho en que se funda, la enunciacin de las leyes, y en su
defecto los principios de equidad y la decisin del asunto controvertido.
En relacin con la primera de las omisiones denunciadas, argumenta que las defensas
que no fueron consideradas por el tribunal de primera instancia al momento de recibirse a
prueba y al momento de fallar la causa y que se reiteran en la sentencia definitiva de
segunda instancia son:
404
a) no son efectivos los hechos sealados por demandante, por lo que incurre en falsedad,
situacin demostrada en autos.
405
Del tenor del fallo de primera instancia se puede apreciar, que el motivo para acoger la
demanda incoada se encuentra contenido en la motivacin sexta al concluir el fallo que la
obligacin de acompaar los antecedentes a la Plataforma Hipotecaria del Banco de Chile
para la evaluacin del crdito eran de cargo del promitente vendedor. Luego, al momento
de emitir pronunciamiento sobre la demanda reconvencional reitera dicho argumento,
agregando que no se ha probado en autos que el promitente comprador haya incurrido en
un incumplimiento del contrato de promesa.
406
Regstrese.
N 1744-2008
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sres. Milton Juica
A., Sergio Muoz G., Sra. Margarita Herreros M., Juan Araya E. y Guillermo Silva G.
407
Vistos:
PRIMERO: Que el demandado ha alegado en autos la excepcin del artculo 1552 del
Cdigo Civil fundado en que la actuacin del demandante constituy tambin un
incumplimiento del contrato, puesto que habiendo proporcionado su parte todos los
antecedentes necesarios para el estudio de ttulos, jams fue citado a Notaria alguna para
firmar el contrato prometido.
Aleg, asimismo, que su parte obr en todo momento de buena fe y como sta se
presume, es carga del demandante probar la mala fe de su parte.
CUARTO: Que, a continuacin, cabe analizar entonces cuales son las consecuencias
jurdicas atribuibles al recproco incumplimiento de las partes, enfrentado el hecho de que
se ha solicitado por ambas la resolucin del contrato - el demandante como objeto
principal de su accin y el demandado y demandante reconvencional subsidiariamente a
su peticin de cumplimiento forzado de contrato-.
Desde ya debe precisarse que el cumplimiento forzado del contrato solicitado por la va
reconvencional no puede prosperar, toda vez que se ha establecido la mora en el
cumplimiento de sus obligaciones por parte del promitente vendedor que acciona.
SEXTO: Que el artculo 1489 del Cdigo Civil envuelve una regla que rige exclusivamente
la situacin que se produce en los contratos bilaterales cuando una de las partes ha
cumplido o est llana a cumplir el contrato y la otra se niega a hacerlo, ya que as lo
expresa de un modo inequvoco el inciso primero, al disponer que en los contratos
bilaterales va envuelta la condicin resolutoria de no cumplirse por uno de los
contratantes lo pactado y el inciso segundo corrobora este sentido otorgando al otro
contratante el derecho alternativo de pedir la resolucin o el cumplimiento del contrato con
indemnizacin de perjuicios, sancin esta que sera absolutamente antijurdica y, por lo
mismo, fuera de la razn si se estimare que la ley la acuerda a favor del otro contratante
que tampoco hubiera cumplido con sus obligaciones;
OCTAVO: Que aunque no hay precepto alguno que resuelva la cuestin de si uno de los
contratantes que no ha cumplido las obligaciones contradas puede o no solicitar la
resolucin de la promesa de venta en contra de la otra parte que tampoco ha dado
cumplimiento a las suyas, los jueces estn en el deber de juzgarla del modo que ms
conforme parezca al espritu general de la legislacin y a la equidad natural de acuerdo
409
DECIMO: Que las anteriores consideraciones resultan igualmente vlidas para rechazar lo
solicitado por el promitente vendedor en su demanda reconvencional subsidiaria.
Por estas consideraciones y lo previsto en los artculos 186 y siguientes del Cdigo de
Procedimiento Civil se decide que se revoca la sentencia de tres de marzo de dos mil tres,
escrita a fojas 111 y siguientes en cuanto por ella se condena al demandado al pago de
cinco millones de pesos, cantidad convenida en la clusula sptima del contrato, como
avaluacin anticipada de perjuicios y a solventar el pago de las costas y en su lugar se
decide que se rechaza dicha pretensin indemnizatoria del demandante y que cada parte
pagar sus costas.
Regstrese y devulvase.
N 1744-2008
410
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sres. Milton Juica
A., Sergio Muoz G., Sra. Margarita Herreros M., Juan Araya E. y Guillermo Silva G.
411
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Clusula de aceleracin
C. Suprema
4., 5., 6. y 7.
2.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
412
413
3.
REGLA .
4.
CITA DE FUENTE.
Corte Suprema
Fallo:
414
VISTOS:
En estos autos rol N 1041-2007 del Segundo Juzgado Civil de La Serena, en procedimiento
ejecutivo caratulado "Banco Bilbao Vizcaya Argentaria con Monardez Castro Carlos", don
Francisco Javier Mery Crespo en representacin de la institucin financiera recin nombrada
solicita tener interpuesta demanda ejecutiva en contra de Carlos Mauricio Monardez Castro
y con su mrito ordenar se despache mandamiento de ejecucin y embargo hasta hacer
entero pago a su representado de la suma de $ 6.944.618, ms intereses penales y costas.
Explica que se pact que el no pago integro y oportuno de una o ms cuotas, da derecho al
Banco para exigir de inmediato, como si fuere de plazo vencido, el total de la obligacin que
estuviere pendiente, la cual devengar desde el da de la mora o simple retardo y hasta el
de su completo y efectivo pago, a eleccin del Banco, el inters mximo convencional o el
inters corriente que corresponda, que tuviere vigencia durante el tiempo de la mora o
simple retardo, en sus diferentes etapas, ms un 50%.
Termina indicando que el deudor no pag la cuota nmero veintisis con vencimiento en
Julio de 2006. La sociedad ejecutada, opuso las excepciones de falta de personera y de
prescripcin, fundada la primera en que la demandante infringi lo dispuesto en el artculo
6 del Cdigo de Procedimiento Civil, al no haber acompaado materialmente el ttulo que
acredita su representacin; la segunda se argumenta en que desde que dej de pagar la
cuota correspondiente a Julio de 2006 hasta la poca en que se le notific la demanda, 10
de Agosto de 2007, ha transcurrido el plazo de prescripcin de la accin ejecutiva.
Por sentencia de diecisiete de noviembre de dos mil siete, escrita a fojas 71 y siguientes el
juez titular, rechaz la excepcin de falta de personera, acogiendo la prescripcin slo
respecto de la cuota N 26 con vencimiento anterior al mes de Agosto de 2006, ordenando
seguir adelante con la ejecucin hasta el entero y cumplido pago de lo adeudado en capital
e intereses. Apelado el fallo por la ejecutada, una de las salas de la Corte de Apelaciones de
La Serena, por resolucin de quince de mayo de dos mil ocho, que se lee a fojas 96, lo
confirm.
415
CONSIDERANDO:
PRIMERO: Que el recurrente sostiene, en primer trmino, que se han vulnerado los artculos
464 N 2, en relacin con los artculos 6 y 7 del Cdigo de Procedimiento Civil, y los
artculos 19 y 20 del Cdigo Civil, fundado en que su parte ha negado que el abogado
compareciente por el Banco BBVA lo represente, correspondiendo a dicha parte acreditar
dicha circunstancia - conforme a lo dispuesto en el artculo 6 del Cdigo de Procedimiento
Civil- al momento de su comparecencia y no siendo legtimo que dicha representacin sea
acreditada con posterioridad y ms an tan pronto haya sido cuestionado por la ejecutada.
A continuacin, en un segundo acpite, sostiene que se han infringido los artculos 464 N 7
del Cdigo de Procedimiento Civil, en relacin con el artculo 98 de la Ley 18.092 y los
artculos 437 y 438 del mismo cuerpo legal y 2518 del Cdigo Civil.
Los artculos 437 y 438 del Cdigo de Procedimiento Civil, sealan que uno de los requisitos
de carcter general de toda ejecucin es que la obligacin sea exigible. De manera que si
plantea que va a ser exigible al momento de notificar la demanda, implicara que la
obligacin al momento de presentar la demanda, no era exigible.
voluntad seria, pero es retroactiva ya que se retrotrae a la fecha en que se dio el primer
vencimiento impago.
SEGUN DO: Que para la adecuada resolucin del recurso, resulta til tener en
consideracin los siguientes antecedentes que rolan en autos:
a) la ejecutada sociedad ces en el pago de las cuotas en que fue dividida la obligacin
contrada con ocasin de la suscripcin del pagar N 504-0055-51-9600096505, a contar
del vencimiento de fecha 30 de Julio de 2006.
417
SEPTIMO: Que el artculo 2514 del Cdigo Civil, dispone: "La prescripcin que extingue las
acciones y derechos ajenos exige solamente cierto lapso de tiempo durante el cual no se
hayan ejercido dichas acciones. Se cuenta este tiempo desde que la obligacin se haya
hecho exigible". Por su parte el artculo 98 de la Ley 18.092 previene que el plazo de
prescripcin de las acciones cambiarias, que incluye al pagar por indicacin expresa del
artculo 107 de la ley aludida, es de un ao contado desde el da del vencimiento del
documento, hecho que evidentemente se va a producir en el caso del pago en cuotas -en el
evento de haberse pactado una clusula de aceleracin de naturaleza imperativa-, por la
mora en la solucin de una de ellas;
Se previene que los Ministros Sr. Juica y Sr. Araya concurren a lo resuelto, teniendo para
ello nicamente presente:
1.- Que el inciso segundo del artculo 105 de la Ley 18.092 precepta que el pagar puede
tener tambin vencimientos sucesivos y, en tal caso, para que el no pago de unas de las
cuotas haga exigible el monto total insoluto, es necesario que as se exprese en el
documento. Esta norma, est relacionada con uno de los requisitos que debe contener este
ttulo de crdito, cual es la poca del pago, segn lo dispone el N 3 del artculo 102 de la
aludida ley. De este modo, la excepcionalidad prevista por la primera norma, est
relacionada nicamente con el plazo fijado para la solucin del crdito y en el solo evento de
que se haya pactado su pago en cuotas, las que, como seala el inciso final del mismo
artculo 105, sin este pacto, cada parcialidad morosa ser protestada separadamente. En
sntesis, el sentido de la clusula de aceleracin es hacer exigible una obligacin que se
paga en cuotas, por el solo hecho de la mora de una de ellas, como si todo el crdito fuere
exigible, aunque no se haya producido la mora de las restantes parcialidades y este es el
derecho que le asiste al acreedor, el de poder cobrar un total o un saldo insoluto de una
obligacin, en e l solo evento de la mora de una de las cuotas en que se dividi el crdito,
cualquiera sea el sentido facultativo o imperativo en que se haya redactado la clusula en
discusin;
2.- Que por otra parte, la redaccin del artculo 98 de la Ley 18.092 confirma la aseveracin
contenida en el fundamento anterior, puesto que esta norma establece que el plazo de
prescripcin de las acciones cambiarias y que incluye al pagar por indicacin expresa del
artculo 107 de la ley aludida, es de un ao contado desde el da del vencimiento del
documento, hecho que evidentemente se va a producir en el caso del pago en cuotas, por la
419
3.- Que estando demostrado en el presente caso, que la exigibilidad de la obligacin que se
demanda se produjo el 30 de Julio de 2006 y, por ende, provoc el vencimiento del
documento, al notificarse al demandado con fecha 7 de agosto de 2007, resulta evidente
que la accin ejecutiva proveniente del pagar que se cobra en estos autos se hallaba
extinguida por el transcurso del ao que contempla el artculo 98 de la Ley 18.092 y, en esta
situacin, la sentencia recurrida al rechazar la excepcin de prescripcin opuesta a la
ejecucin ha incurrido en el error de derecho que se le imputa y, por ende, procede que el
arbitrio interpuesto sea acogido.
Regstrese.
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sr. Milton Juica A.,
Sra. Margarita Herreros M., Sres. Juan Araya E. y Guillermo Silva G. y Abogado Integrante
Sr. Jorge Medina C.
No firma el Abogado Integrante Sr. Medina, no obstante haber concurrido a la vista del
recurso y acuerdo del fallo, por estar ausente.
VISTOS:
420
Se reproduce la sentencia de primer grado con excepcin del fundamento sexto que se
elimina.
Lo expresado en los motivos tercero al octavo del fallo de casacin que antecede y
considerando, adems, que en la especie la deudora principal dej de pagar que venca el
30 de Julio de 2006 y de ah en adelante las restantes, por lo que, atendidos los trmino s
imperativos y obligatorios de la clusula de aceleracin pactada, el retardo se produjo a
partir de dicha fecha, oportunidad desde la cual corresponde en el caso en particular
computar el plazo de prescripcin, el que transcurri en exceso al 7 de agosto de 2007, da
en que se notific la demanda.
Y de conformidad, adems, con lo que disponen los artculo 186 del Cdigo de
Procedimiento Civil, 98, 100, 105 y 107 de la Ley 18.092 y 2514 del Cdigo Civil, se declara:
que se revoca, la sentencia apelada de diecisiete de noviembre de dos mil siete, escrita de
fojas 71 y siguientes, en cuanto rechaza la excepcin de prescripcin de la accin opuesta
por la ejecutada; y en su lugar se declara que se la acoge, con costas y, en consecuencia,
se rechaza en todas sus partes la demanda deducida en lo principal de fojas 10 y se
absuelve de la ejecucin al ejecutado, debiendo alzarse los embargos, en su caso.
Se previene que los Ministros Sr. Juica y Sr. Araya concurren a la revocacin del fallo de
primer grado, pero teniendo para ello nicamente en consideracin los fundamentos
esgrimidos en la prevencin contenida en el fallo de casacin.
421
Rol N 3392-08.
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sr. Milton Juica A.,
Sra. Margarita Herreros M., Sres. Juan Araya E. y Guillermo Silva G. y Abogado Integrante
Sr. Jorge Medina C.
No firma el Abogado Integrante Sr. Medina, no obstante haber concurrido a la vista del
recurso y acuerdo del fallo, por estar ausente.
422
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Lesin Enorme.
C. Suprema
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
OCTAVO: Que, demostrada la ausencia de infraccin a las normas reguladoras de la
prueba, corresponde manifestar que los jueces del grado dieron por establecido que no se
acredit el justo precio del inmueble, al tiempo del contrato, y tampoco que el precio
recibido por la actora es inferior a la mitad de ese eventual justo precio.
NOVENO: Que, de este modo, al determinarse por los jueces del fondo los supuestos
fcticos que han sido reproducidos en el raciocinio que precede, especialmente, no
haberse justificado el justo precio del inmueble, sobre que recay la cesin y venta de
acciones y derechos, se puede advertir que los restantes argumentos del recurso de
casacin en el fondo contraran los hechos tal como fueron establecidos por los
423
Esta constante se repetir en el artculo 1629 del Proyecto de Cdigo Civil de 1853, pero,
en definitiva el Cdigo Civil abandona la concepcin subjetiva, estructurndolo como un
vicio de carcter objetivo que constituye un motivo especial de rescisin o nulidad relativa,
de forma tal que solamente procede en los casos y en la forma que el mencionado Cdigo
la contempla, esto es, requiriendo texto expreso, por lo que se hace referencia en los
artculos 1234, 1348, 1544, 1888, 1900, 2206 y 2443, reglamentndola con algn detalle
mayor en casos determinados. Es as como se puede observar que nuestro legislador no
contempl este motivo de nulidad o hecho ilcito en la cesin y venta de acciones y
derechos, aun cuando recaigan sobre inmuebles, de forma tal que no resulta aplicable al
caso de autos, circunstancia que impone, igualmente, el rechazo de la infraccin de los
artculos 1888 y 1889 del Cdigo Civil, los cuales, en todo caso, se encuentran en el
Ttulo XXIII del Libro IV del Cdigo Civil, relativo a la compraventa y no en el Ttulo XXV,
424
REGLA .
a. Al determinarse por los jueces del fondo que no se acredit el justo precio del inmueble,
al tiempo del contrato, y tampoco que el precio recibido por la actora es inferior a la mitad
de ese eventual justo precio, corresponde rechazar la demanda
a.- El cdigo civil chileno, a diferencia de lo sealado en el artculo 1629 del proyecto de
Cdigo Civil de 1853 y otros escritos anteriores de Andrs Bello, abandon la concepcin
subjetiva de lesin como vicio del consentimiento, estructurndolo como un vicio de
carcter objetivo que constituye un motivo especial de recisin, de forma tal que
solamente procede en los casos y en la forma que el mencionado cdigo contempla, es
decir requiere texto expreso al que se hace referencia en los artculos 1234, 1348, 1544,
1888, 1900, 2206 y 2443. Es as como la venta de acciones y derechos, an cuando
recaigan sobre inmuebles, no se encuentra contemplado en los casos de lesin enorme,
por lo que ella no resulta aplicable.
4. CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 20 agosto 2009. M.J. N 21044
Corte Suprema
Fallo:
425
Vistos:
En estos autos Rol N 3481-2005 del Segundo Juzgado Civil de Rancagua, procedimiento
ordinario, caratulado "Bories Villalobos, Claudia Elena con Urbina Lian, Cristin
Mauricio", doa Claudia Elena Bories Villalobos deduce demanda de nulidad relativa o
rescisin del contrato de cesin y compraventa en contra de don Cristin Mauricio Urbina
Lian para que se declare: que se rescinde, por lesin enorme, el sealado contrato de
cesin y compraventa de derechos inmuebles, celebrado con el demandado con fecha 14
de marzo de 2005, inscrito a fojas 3184 N 2437 del Registro de propiedad del
Conservador de Bienes Races de Rancagua del ao 2005, y quedando sin efecto la
inscripcin aludida, la que deber ser cancelada por el seor Conservador, y que se
mantiene, en consecuencia, la inscripcin de dominio anterior a nombre de la
demandante, en la porcin de derechos correspondientes, o que se debe realizar una a su
favor, con costas.
Mediante sentencia de veintinueve de septiembre de dos mil siete, escrita a fojas 137, la
jueza titular del mencionado tribunal, rechaz la demanda deducida a fojas 21.
En su contra el actor formul recurso de casacin en el fondo que se lee a fojas 180.
Considerando:
contrato y, por ende, tampoco el hecho de que el precio recibido por la actora fuere
inferior a la mitad de ese justo precio, por lo que a su juicio los falladores no ponderaron
en forma legal la totalidad de la prueba producida por las partes.
a) Infraccin a los artculos 1702 y 1706 del Cdigo Civil en relacin con los artculos 346
N 3 y 384 N 1 del Cdigo de Procedimiento Civil. Indica quien recurre que el informe de
tasacin comercial del inmueble sub judice, evacuado por don Manuel Daz Farfn,
instrumento privado inobjetado, seala que la propiedad tiene un valor de UF 4038.
Tratase de un instrumento suficiente para probar un hecho de acuerdo a los artculos
1702 y 1706 del Cdigo Civil en relacin con el artculo 346 N 3 del Cdigo de
Enjuiciamiento Civil. El que se haya evacuado un ao despus del contrato de
compraventa no es motivo para restarle valor probatorio.
b) Transgresin al artculo 384 N1 en relacin con el artculo 426 inciso segundo, ambos
del Cdigo ltimamente expresado. Postula que la declaracin del seor Daz Farfn ,
corresponde a la de un testigo imparcial y verdico, por lo que constituye una presuncin
judicial, conforme los citados preceptos dado que de su informe es posible concluir que el
precio de los derechos inmuebles en total es de 3.230 UF, esto es, $ 58.596.000.-
c) Vulneracin del artculo 384 N 2 del Cdigo de Procedimiento Civil, seala que sin
perjuicio de lo expuesto por el seor Daz Farfn, las declaraciones de los testigos
presentados por su parte, cuando deponen sobre el punto N 3, son contestes en las
circunstancias esenciales sobre las que declaran, dando razn de sus dichos,
especficamente sobre el justo precio de la cosa vendida, el que vara entre los $
50.000.000 y los $ 58.596.000.
d) Se han conculcado los artculos 1700 y 1706 del Cdigo Civil en relacin con el artculo
342 N 1 y 2 del Cdigo de Procedimiento Civil. Explica que el certificado de avalo fiscal
de la propiedad correspondiente al segundo semestre de 2006; que asciende a $
24.810.056, no puede considerarse como justo precio pues el valor comercial del
inmueble es mayor que el fiscal.
subdivisin del resto del predio La Casa de 1504 metros cuadrados, cuyo precio pagado
por el demandado ascendi a $ 6.000.000, dicho documento fue rechazado por el
sentenciador.
SEGUNDO: Que, previo al anlisis de los argumentos del recurso es menester consignar
los siguientes antecedentes del proceso:
a) Doa Claudia Bories Villalobos dedujo demanda ordinaria de rescisin por lesin
enorme en contra de don Cristin Mauricio Urbina Lian, para que se declare la nulidad
del contrato de cesin de derechos inmuebles, celebrado con el demandado el 14 de
marzo de 2005, segn lo expuesto en lo expositivo de este fallo. La cosa cedida, vendida
y transferida fue el cincuenta por ciento de los derechos de propiedad que le
correspondan en el inmueble rural ubicado en el Arenal, comuna de Coinco, Provincia de
Cachapoal, VI Regin con una superficie aproximada de 7,71 hectreas segn plano
archivado Nmero VI-1-6861S.R.
Ella pretende que ese precio fue inferior a la mitad del justo precio del inmueble en la
porcin cedida, pues el valor de la totalidad del inmueble asciende aproximadamente a la
suma de $ 50.000.000, segn quiere acreditar mediante la cesin de derechos efectuada
por doa Mara Erica Villalobos Narbona a don Ricardo Rincn Gonzlez, con fecha 28 de
abril de 2005, correspondiente al cuarenta por ciento del cincuenta por ciento que le
corresponde en dominio a su copropietaria, porcentaje que representa el veinte por ciento
del dominio, cesin en la que se pag la cantidad de diez millones de pesos.
Dice que no existe lesin enorme puesto que del certificado de avalo que acompaa,
correspondiente al segundo semestre del ao 2005, el inmueble tiene un valor de $
23.870.099.
CUARTO: Que antes que todo, debe consignarse, como lo ha reconocido reiteradamente
esta Corte, que se entienden vulneradas las normas reguladoras de la prueba,
fundamentalmente, cuando los sentenciadores invierten el onus probandi, rechazan las
pruebas que la ley admite, aceptan las que la ley rechaza, desconocen el valor probatorio
de las que se produjeron en el proceso cuando la ley le asigna uno determinado de
carcter obligatorio o alteran el orden de precedencia que la ley le diere.
jueces del mrito, actividad que resulta extraa a los fines de la casacin en el fondo.
que un determinado antecedente fctico produce en el raciocinio del fallador, para hacerle
sostener una consecuencia por deduccin lgica, de manera que la gravedad est dada
por la mayor o menor conviccin que produce en el nimo del juez. Si bien el artculo
1712 del Cdigo Civil nada dice acerca de la gravedad, si lo hace el citado artculo 426,
en cuanto expresa que una sola presuncin puede constituir plena prueba cuando -como
se destac en la transcripcin de la norma- a juicio del tribunal, tenga caracteres de
gravedad y precisin para formar su convencimiento, de modo que no queda dudas que
su apreciacin queda entregada a los jueces del fondo, puesto que, en el mejor de los
casos, "son revisables en casacin los elementos de las presunciones que son
ostensibles y que el juez debe manifestar y encuadrar en la ley, pero no pueden ser
revisables, como en ninguna prueba puede serlo, el proceso ntimo del juez para formar
su convencimiento frente a los medios probatorios que renen las condiciones exigidas
por la ley. La apreciacin de la gravedad de las presunciones escapa absolutamente al
control del Tribunal de Casacin y as lo ha declarado la Corte Suprema" (Waldo Ortzar
Latapiat, Las Causales del Recurso de Casacin en el Fondo en Materia Penal, pginas
427 y 428).
Por otra parte, la precisin est referida a lo unvoco de los resultados del raciocinio del
juez, de modo que una misma presuncin no conduzca sino a una consecuencia y no a
mltiples conclusiones. Pero esta precisin del indicio est condicionada por el
razonamiento del juez y por la ponderacin de los elementos sobre los que la asienta y los
dems antecedentes probatorios de la causa, de manera que resultar de la valoracin
individual y comparativa de este medio con los dems, quedando, de estn forma,
relativizada la misma precisin, por lo que es indiscutiblemente subjetiva y personal del
juzgador, a quien debe persuadir, quedando su revisin, por este mismo hecho, excluida
del Tribunal de Casacin. Por ltimo, la concordancia se refiere a la conexin que debe
existir entre las presunciones y que todas las que se den por establecidas lleguen a una
misma consecuencia, por lo que escapa al control de la Corte de Casacin ya que importa
una ponderacin individual y comparativa de las presunciones entre s y con los dems
elementos de juicio reunidos en el proceso.
De todo lo reseado no cabe sino concluir que el artculo 426 del Cdigo de
Procedimiento Civil no reviste la naturaleza de una norma reguladora de la prueba, de
modo tal que su eventual contravencin no puede ser revisada por la va extraordinaria
que constituye el recurso de casacin en el fondo.
431
NOVENO: Que, de este modo, al determinarse por los jueces del fondo los supuestos
fcticos que han sido reproducidos en el raciocinio que precede, especialmente, no
haberse justificado el justo precio del inmueble, sobre que recay la cesin y venta de
acciones y derechos, se puede advertir que los restantes argumentos del recurso de
casacin en el fondo contraran los hechos tal como fueron establecidos por los
sentenciadores, lo que impone su rechazo.
DECIMO: Que cabe precisar que en atencin al carcter de derecho estricto del recurso
de casacin en el fondo, ste slo resulta procedente por error de derecho, conforme a
los extremos del agravio del recurrente, circunstancia que limita la competencia del
tribunal "ad quem", sin que proceda en el anlisis del recurso el estudio de otros motivos
que los denunciados, como sera la procedencia o no de la rescisin por lesin enorme en
un contrato distinto al de la compraventa.
Y visto, adems, lo dispuesto en los artculos 764 y 767 del Cdigo de Procedimiento
Civil, se desestima el recurso de casacin en el fondo deducido en lo principal de fojas
180, por el abogado de la parte demandante, don Ivn Tomascic Ivelic, en contra de la
sentencia de cuatro de marzo de dos mil ocho, que se lee a fojas 179.
Esta constante se repetir en el artculo 1629 del Proyecto de Cdigo Civil de 1853, pero,
en definitiva el Cdigo Civil abandona la concepcin subjetiva, estructurndolo como un
vicio de carcter objetivo que constituye un motivo especial de rescisin o nulidad relativa,
de forma tal que solamente procede en los casos y en la forma que el mencionado Cdigo
la contempla, esto es, requiriendo texto expreso, por lo que se hace referencia en los
artculos 1234, 1348, 1544, 1888, 1900, 2206 y 2443 , reglamentndola con algn detalle
mayor en casos determinados. Es as como se puede observar que nuestro legislador no
contempl este motivo de nulidad o hecho ilcito en la cesin y venta de acciones y
derechos, an cuando recaigan sobre inmuebles, de forma tal que no resulta aplicable al
caso de autos, circunstancia que impone, igualmente, el rechazo de la infraccin de los
artculos 1888 y 1889 del Cdigo Civil, los cuales, en todo caso, se encuentran en el
Ttulo XXIII del Libro IV del Cdigo Civil, relativo a la compraventa y no en el Ttulo XXV,
sobre la cesin de derechos.
N 1865-08.
433
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema por los Ministros Sres. Milton Juica
A., Sergio Muoz G., Sra. Margarita Herreros M., Sres. Juan Araya E. y Guillermo Silva
G.
No firman el Ministro Sr. Silva no obstant e haber concurrid a la vista del recurso y
acuerdo del fallo, por estar con permiso.
434
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Obligacin accesoria.
C. Suprema
4. y 5.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
TERCERO: Que el artculo 2407 del Cdigo Civil ha definido la hipoteca como un derecho
de prenda, constituido sobre inmuebles que no dejan por eso de permanecer en poder del
deudor. Por su parte, el inciso 1 del artculo 2384 del mismo cuerpo legal dispone que
por el contrato de empeo o prenda se entrega una cosa mueble a un acreedor para la
seguridad de su crdito y el artculo 2386 seala que este contrato supone siempre una
obligacin principal a que accede.
Ahora bien, lo antes dicho se aplica a todos los modos de extinguirse las obligaciones que
consagra el artculo 1567 del Cdigo Civil, entre ellos, la prescripcin liberatoria. En
efecto, el artculo 2516 del mismo Cdigo precepta que la accin hipotecaria, y las
dems que proceden de una obligacin accesoria, prescriben junto con la obligacin a
que acceden. En consecuencia, el nico modo para que la accin que emana del contrato
de hipoteca se extinga por prescripcin consiste en que se extinga por esta va la accin
que nace de la obligacin cuyo cumplimiento la hipoteca cauciona.
Este hecho implica que el acreedor hipotecario tiene derecho a perseguir el inmueble
dado en hipoteca de manos de quien se encuentre (derecho de persecucin, regulado en
el artculo 2428 del Cdigo Civil) y a venderlo para el pago de su acreencia (derecho de
venta, reglamentado en el artculo 2424 del mismo cuerpo legal). Ahora bien, el primero
de los derechos nombrados permite, como se dijo, perseguir el bien raz hipotecado en
poder de quien se encuentre y esta persona puede ser perfectamente una distinta al
deudor personal. Sin perjuicio de ello, el acreedor puede tambin, no obstante la garanta
hipotecaria, pretender el pago de su crdito en la realizacin de otros bienes del deudor,
en virtud del derecho de prenda general que tiene sobre todos ellos. Y en el evento de no
haberlos o ser stos insuficientes, podr siempre dirigirse contra quien tenga en su poder
el inmueble hipotecado. Ahora bien, en este ltimo caso, cuyo ha sido el de autos, no
436
REGLA .
a.- La interrupcin de la prescripcin que opera respecto de la obligacin principal
garantizada con la hipoteca, interrumpe tambin la de la obligacin hipotecaria, accesoria
de la primera. De estimarse lo contrario, resultara imaginable que mientras la prescripcin
de la accin emanada de la obligacin principal, caucionada con la hipoteca, ha sido
interrumpida, la de la accin hipotecaria sigue su curso y puede eventualmente llegar a
cumplirse, extinguindose por esta va. Lo anterior no puede aceptarse, pues importa
negar caractersticas esenciales de la hipoteca: constituye una caucin, esto es, una
obligacin que se contrae para las seguridad de otra obligacin, propia o ajena (artculo
46 del Cdigo Civil) y es un contrato accesorio, es decir, necesita de otra convencin
principal a la cual acceder para subsistir (artculo 1442 de ese texto normativo). .
4. CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 31 agosto 2009. M.J. N 21332
437
Fallo:
VISTOS:
En estos autos Rol N 52-2005.- del Segundo Juzgado Civil de Talca sobre juicio ejecutivo
de desposeimiento, caratulados "Banco Santander Chile con Munita Falcn, Manuel", por
sentencia de cuatro de abril de dos mil seis, escrita a fojas 52, el seor Juez Titular del
referido tribunal rechaz las excepciones de litis pendencia y falta de requisitos del ttulo y
acogi la de prescripcin, absolviendo al ejecutado de la ejecucin. Apelado este fallo por
la parte ejecutante, una de las Salas de la Corte de Apelaciones de Talca, en sentencia
de ocho de septiembre de dos mil ocho, que se lee a fojas 84, lo revoc en la parte que
acoga la excepcin de prescripcin y en su lugar declar que sta queda rechazada.
CONSIDERANDO:
De este documento, termina el recurso sobre el punto, no nacen otras acciones que las
cambiarias, las que prescriben absolutamente en el plazo de un ao; en consecuencia, la
accin, a la fecha de iniciarse el juicio contra el tercer poseedor de la finca hipotecada, se
438
SEGUNDO: Que el fallo objeto del recurso establece que el artculo 2516 del Cdigo Civil
previene que la accin hipotecaria prescribe junto con la obligacin a que accede,
precepto que viene a corroborar lo sealado por el artculo 2434 del mismo Cdigo, en
cuanto ste seala que la hipoteca se extingue junto con la obligacin principal. En otras
palabras, agregan los jueces, la obligacin hipotecaria pervive tanto lo mismo ocurra con
la obligacin principal.
Los autos "Banco Santander Chile con Abarza Orellana, Juan", contina la sentencia,
demuestran que el suscriptor del pagar invocado en la demanda fue requerido de pago
el 5 de octubre de 2004, producindose con ello la interrupcin civil de la prescripcin,
cuyo curso se inici el 1 de noviembre de 2003, fecha en que se produjo el vencimiento
de la cuota en relacin con la cual el acreedor ejerci el derecho conferido en la clusula
de aceleracin. Tal emplazamiento es, por lo dems -aaden los jueces-, un hecho en
que las partes se encuentran contestes.
ejercitada en autos no se ha extinguido por prescripcin, puesto que, por obra de la citada
interrupcin civil, encontrndose vigente la obligacin principal persiste la hipoteca que la
resguarda.
TERCERO: Que el artculo 2407 del Cdigo Civil ha definido la hipoteca como un derecho
de prenda, constituido sobre inmuebles que no dejan por eso de permanecer en poder del
deudor. Por su parte, el inciso 1 del artculo 2384 del mismo cuerpo legal dispone que
por el contrato de empeo o prenda se entrega una cosa mueble a un acreedor para la
seguridad de su crdito y el artculo 2386 seala que este contrato supone siempre una
obligacin principal a que accede.
440
Ahora bien, lo antes dicho se aplica a todos los modos de extinguirse las obligaciones que
consagra el artculo 1567 del Cdigo Civil, entre ellos, la prescripcin liberatoria. En
efecto, el artculo 2516 del mismo Cdigo precepta que la accin hipotecaria, y las
dems que proceden de una obligacin accesoria, prescriben junto con la obligacin a
que acceden. En consecuencia, el nico modo para que la accin que emana del contrato
de hipoteca se extinga por prescripcin consiste en que se extinga por esta va la accin
que nace de la obligacin cuyo cumplimiento la hipoteca cauciona.
Este hecho implica que el acreedor hipotecario tiene derecho a perseguir el inmueble
dado en hipoteca de manos de quien se encuentre (derecho de persecucin, regulado en
el artculo 2428 del Cdigo Civil) y a venderlo para el pago de su acreencia (derecho de
venta, reglamentado en el artculo 2424 del mismo cuerpo legal). Ahora bien, el primero
de los derechos nombrados permite, como se dijo, perseguir el bien raz hipotecado en
poder de quien se encuentre y esta persona puede ser perfectamente una distinta al
deudor personal. Sin perjuicio de ello, el acreedor puede tambin, no obstante la garanta
hipotecaria, pretender el pago de su crdito en la realizacin de otros bienes del deudor,
en virtud del derecho de prenda general que tiene sobre todos ellos. Y en el evento de no
haberlos o ser stos insuficientes, podr siempre dirigirse contra quien tenga en su poder
el inmueble hipotecado. Ahora bien, en este ltimo caso, cuyo ha sido el de autos, no
puede sino afirmarse que la notificacin de la demanda en el proceso en que el acreedor
dirigi la accin de cobro o cumplimiento -que es la que emana de la obligacin principalcontra el deudor personal, adems de interrumpir la prescripcin de esa accin, hizo lo
propio con la de la accin hipotecaria, pues, de estimarse lo contrario, resultara
imaginable que mientras la prescripcin de la accin emanada de la obligacin principal,
caucionada con la hi poteca, ha sido interrumpida, la de la accin hipotecaria sigue su
curso y puede eventualmente llegar a cumplirse, extinguindose por esta va. Lo anterior
no puede aceptarse, pues importa negar las caractersticas que, segn se dijo en el
fundamento tercero de este fallo, constituyen parte de la esencia de la hipoteca.
441
Por estas consideraciones y visto, adems, lo dispuesto en las normas legales citadas y
en los artculos 764, 765, 767 y 805 del Cdigo de Procedimiento Civil, se rechaza el
recurso de casacin en el fondo deducido por la parte ejecutada en lo principal de la
presentacin de fojas 86, contra la sentencia de ocho de septiembre de dos mil cuatro,
escrita a fojas 84.
N 6461-08.-.
442
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema por los Ministros Sr. Sergio Muoz
G., Sra. Margarita Herreros M., y Sr. Guillermo Silva G. y Abogados Integrantes Sres.
Jorge Medina C. y Domingo Hernndez E.
443
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Lesin Enorme.
C. Suprema
6.
Lesin Enorme.
C. Suprema
10.
y
11
Reemplazo.)
(Sent.
de
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
SEXTO: Que zanjado lo anterior resulta necesario hacerse cargo de la afirmacin
efectuada en el fallo censurado en orden a que no se rindi en autos la "nica" prueba
que permite resolver el presente juicio, esto es, el informe pericial.
Al efecto resulta que la prueba documental aportada por el actor y que se encuentra
444
En efecto, los jueces del grado al negar al demandante el medio probatorio recin
consignado han incurrido en la segunda hiptesis que se consignara en el prrafo
segundo de la motivacin cuarta, esto es han rechazado un medio de prueba permitido
por la ley.
Sentencia de Remplazo
Dcimo: Que fundamentalmente y para los efectos del anlisis del caso, corresponde
expresar que el contrato de compraventa es bilateral, oneroso y conmutativo, puesto que
genera obligaciones para las dos partes y tiene por objeto la utilidad de ambos
contratantes, gravndose cada uno a beneficio del otro, como, adems, se obligan a
realizar una prestacin, cuyo objeto consiste bsicamente en dar una cosa y pagar el
precio; prestaciones que se miran como equivalentes. Lo anterior tiene su explicacin en
el antecedente que en los contratos bilaterales la causa de la obligacin de un contratante
es el objeto de la obligacin del otro, que por el hecho de ser, adems, conmutativos
causa y objeto deben ser equivalentes, esto es de una entidad similar, objetivamente
apreciadas.
La lesin se produce cuando se altera la ltima cualidad, esto es cuando las prestaciones
no permiten ser calificadas como equivalentes. Esta lesin permite ser calificada de
enorme por parte del vendedor, "cuando el precio que recibe es inferior a la mitad del
justo precio de la cosa que vende" (art. 1889 del Cdigo Civil).
Resulta determinante precisar que el justo precio debe ser establecido en concreto, pero
conforme a parmetros objetivos, conforme a cierta opinin comn y generalmente
aceptada, respetando las circunstancias de tiempo y espacio, esto es, a la fecha del
contrato y respecto de la propiedad ubicada en Huara y ms precisamente el sitio 12 del
Loteo Posadas de Huara.
445
Undcimo: Que constituye un antecedente relevante para los efectos de precisar el justo
precio la Ley 17.235 que establece el impuesto territorial, cuyo objeto es gravar los bienes
races con una contribucin a favor del erario nacional, en que la tasacin la efecta el
Servicio de Impuestos Internos bajo parmetros objetivos y que se mantiene en forma
actualizada, en que es el propio contribuyente quien puede participar en ella presentando
una declaracin descriptiva del inmueble e incluso reclamar posteriormente del avalo,
segn lo regula el artculo 149 y siguientes del Cdigo Tributario. Es la rigurosidad de este
procedimiento, como los derechos que se conceden al contribuyente, los que permiten al
legislador utilizar en diferentes materias dicha regulacin. Es as que el artculo 20, letra b)
de la Ley de Impuesto a la Renta dispone de un sistema para calcular la renta presunta
bajo los siguientes trminos: "Los contribuyentes propietarios o usufructuarios de bienes
races agrcolas, que no sean sociedades annimas y que cumplan los requisitos que se
indican ms adelante, pagarn el impuesto de esta categora sobre la base de la renta de
dichos predios agrcolas, la que se presume de derecho es igual al 10% del avalo fiscal
de los predios. Cuando la explotacin se hag a a cualquier otro ttulo se presume de
derecho que la renta es igual al 4% del avalo fiscal de dichos predios."
De igual manera el artculo 486 del Cdigo de Procedimiento Civil dispone, que para los
efectos de tasar y vender en pblica subasta una propiedad: "La tasacin ser la que
figure en el rol de avalos que est vigente para efectos de la contribucin de haberes, a
menos que el ejecutado solicite que se haga nueva tasacin".
Estos antecedentes legislativos resultan suficientes para determinar que, ante la ausencia
de otros elementos de juicios relevantes y que otorguen certeza sobre el valor de la
propiedad, el avalo fiscal efectuado por el Servicio de Impuestos Internos para el pago
de las contribuciones de bienes races, representa el justo precio de los inmuebles, en
relacin al cual ha de efectuarse la comparacin del valor pagado realmente, con el objeto
de calificar la existencia de una lesin inferida al vendedor.
REGLA .
446
b. En los contratos bilaterales que por el hecho de ser, adems, conmutativos, causa y
objeto deben ser equivalentes, esto es de una entidad similar, objetivamente apreciadas.
Cita de Fuente.
C. Suprema, 08 septiembre 2009.F. del M. N551, p.19. G.J. N 351, p.80. M.J. N 21362.
CL/JUR/7597/2009
Corte Suprema
Fallo:
VISTOS:
447
En estos autos Rol N 3271 del Juzgado Civil de Pozo Almonte, caratulados "Moiss
Vergara con Luis Vergara", compareci el primero de los nombrados y dedujo demanda
en juicio ordinario por lesin enorme en contra de Luis Vergara Guzmn con el fin de
obtener la nulidad del contrato de compraventa por ellos suscrito con fecha 5 de
Diciembre de 2002 y por el cual vendi el bien raz ubicado en la localidad de Huara,
Provincia de Iquique, singularizado como sitio N 12 del loteo Posadas de Huara, inscrito
actualmente a nombre del comprador en el Registro de Propiedad de Pozo Almonte del
ao 2003. Relata al efecto que el precio de la venta fue de $ 1.000.000, en circunstancias
que el justo precio de la propiedad vendida, era uno no inferior a $ 10.560.087, segn el
avalo fiscal a la poca del contrato, habiendo entonces sufrido lesin enorme su parte
por haber recibido un precio inferior a la mitad del justo precio de la cosa vendida,
debiendo rescindirse por ello el contrato. Solicita que, como consecuencia de la
declaracin de nulidad, se dejen sin efecto las inscripciones efectuadas, se le restituya el
inmueble y se ordene el pago de las costas a su parte.
Por sentencia de dos de abril de dos mil siete, escrita a fojas 88 y siguientes el juez titular
del referido tribunal rechaz la demanda en todas sus partes. Apelado este fallo por el
demandante, una de las Salas de la Corte de Apelaciones de Iquique, en sentencia de
catorce de marzo de dos mil ocho, que se lee a fojas 110 y siguientes, lo confirm.
Por resolucin de fecha doce de junio de dos mil ocho se orden traer los autos en
448
relacin.
CONSIDERANDO:
Sostiene que el tribunal de segundo grado, que confirma el fallo de primera instancia,
resuelve sin considerar el mrito y valor probatorio de los instrumentos pblicos y oficiales
del Estado (certificado de la Unidad de Avaluaciones del Servicio de Impuestos Internos)
producidos en la instancia y relativos a la determinacin del justo precio en el caso sublite; omite, entonces, aplicar la norma del 1700 Cdigo Civil, por lo que se incurre en falsa
aplicacin de ley, pues, por una parte se invoca el precepto en el fallo, pero no se aplica
de manera alguna en la materia a resolver. Argumenta que, del mismo modo, no se
consideraron las normas contempladas en los artculos 342 N 2 y 3 del Cdigo de
Procedimiento Civil, por lo que se ha dejado de aplicar el derecho en forma correcta, lo
que ha influido sustancialmente y de manera significativa en lo resuelto, al decidirse que
no se encuentra acreditado el justo precio, no obstante que, al contrario, ste aparece
evidente y natural al detenerse sobre el valor de plena fe y prueba que emanan de los
documentos pblicos y documento oficial que su parte acompa.
Expone que respecto de la carga de la prueba es evidente que el actor la asumi en toda
su extensin e intensidad, de manera que ofreci y produjo todos los medios de prueba
que se consagran en el sistema legal, descrito bsicamente para estos efectos en las
normas del artculo 1698 Cdigo Civil y 341 del Cdigo de Procedimiento Civil, de modo
que es un error de proporciones graves slo especificar que el actor se circunscribi a
acompaar un instrumento pblico, como es el certificado de SII que califica de ineficaz e
impertinente. Su parte, oportunamente, produjo prueba confesional, instrumental y ofreci
y realiz los trmites y ritualidades asignadas al medio de prueba pericial, como consta en
el proceso e inspeccin personal del tribunal y de la misma manera, es procedente la
prueba por presunciones tanto legales como judiciales. Argumenta, que al sealarse lo
contrario en el fallo el tribunal se desva y se desvincula del mrito de los antecedentes
con infraccin al artculo 160 del Cdigo de Procedimiento Civil. Afirma, que lo cierto y
449
concreto es que est acreditado por el medio de prueba legal aceptado en el derecho que
el precio de la venta fue de $ 1.000.000. En relacin con la determinacin del justo precio,
agrega luego, es evidente que el certificado de SII constituye un instrumento pblico, cuyo
mrito debe considerarse al tenor de las normas contempladas en los artculos 1699,
1700, 1701, 1706 y siguientes del Cdigo.
Alega el recurrente que no cabe duda que en el sistema jurdico no est definido que es el
"justo precio" en los trminos que refiere el artculo 1889 y siguientes del Cdigo Civil, de
manera que tiene que asociarse como norma integradora al efecto el artculo 24 del
Cdigo Civil y las que sobre fijacin de valor mnimo en la venta forzada contemplan los
artculos 485, 486 y siguientes del Cdigo de Procedimiento Civil.
Sostiene que el fallo recurrido incurre en un error de derecho cuando razona que para la
determinacin del justo precio es imprescindible que se ofrezca y produzca la prueba
pericial, puesto que el denominado "justo precio" del artculo 1889 del Cdigo Civil no es
otra cosa que un precio pero con el calificativo de justo.
Luego, sostiene que el tribunal comete un nuevo yerro al valorar y considerar la prueba
testimonial de la demandada cuyo tenor y sentido es alterar, mediante complemento, el
monto del precio pactado en escritura pblica y otros instrumentos privados. Es evidente,
arguye, que no se admite testimonial respecto de una obligacin que haya debido
consignarse por escrito al tenor de lo dispuesto en el artculo 1708 del Cdigo Civil y
deben constar por escrito actos y contratos que contienen la entrega o promesa de una
cosa que valga ms de 2 UTM conforme al artculo 1709 del mismo cuerpo legal. Por ello
al resolver del modo expuesto se deja sin aplicacin las normas de los artculos 1709,
1806 y 1706 del Cdigo Civil.
450
TERCERO: Que para un adecuado anlisis de los errores de derecho denunciados por el
recurrente, resulta til adems sealar las motivaciones principales invocadas en el fallo
que se impugna para rechazar lo pedido.
En relacin con la carga de la prueba el fallo destaca que en cuanto al requisito esencial
de la accin deducida, esto es, la recepcin por parte del vendedor de un precio inferior a
la mitad del justo precio de la cosa que se vende, la carga de la prueba le corresponde a
quien ha alegado dicha circunstancia, esto es, al demandante y vendedor don Moiss
Vergara Guzmn y para tales efectos, ste slo acompa el certificado de avalo total
deflactado al segundo semestre de 2002 de la propiedad, que es de $10.560.087, en el
cual se indica perentoriamente que el avalo que all se consigna no corresponde a una
tasacin comercial de la propiedad.
QUINTO: Que sealado lo anterior resulta pertinente precisar que los medios probatorios
que la ley contempla para ser utilizados en juicio se encuentran contemplados en el
artculo 341 del Cdigo de Procedimiento Civil, a saber: instrumentos, testigos, confesin
de parte, inspeccin personal del tribunal, informe de peritos y presunciones.
En relacin con la accin de lesin enorme ejercida, adems debe sealarse que no
existe en la legislacin civil pertinente norma que excluya alguno de los medios recin
consignados, por lo que debe asentarse que el demandante se encuentra habilitado para
ejercer todos los medios de prueba que la ley autoriza para acreditar sus dichos.
Al efecto resulta que la prueba documental aportada por el actor y que se encuentra
agregada a fojas 4 y 5, consistente en certificado de avalo fiscal y vigente de la
propiedad enrolada con el nmero 2300-0001 y ubicada en Panamerica ST 12 Posada
Huara -valorada de conformidad con lo que estatuye el artculo 1700 del Cdigo Civil, por
tener el carcter de instrumento pblico- hacen plena prueba en cuanto al valor asignado
por el Fisco de Chile a la propiedad materia del contrato sub-lite a la fecha de la
transaccin, 5 de Diciembre de 2002, el que corresponde a $ 10.560.087.-, razn por la
cual no pudieron los sentenciadores excluir simplemente la prueba, sin con ello vulnerar el
citado precepto.
En efecto, los jueces del grado al negar al demandante el medio probatorio recin
consignado han incurrido en la segunda hiptesis que se consignara en el prrafo
segundo de la motivacin cuarta, esto es han rechazado un medio de prueba permitido
por la ley.
Por estas consideraciones y visto, adems, lo dispuesto en los artculos 764 y 767 del
Cdigo de Procedimiento Civil, se acoge el recurso de casacin en el fondo deducido en
lo principal de fojas 112, por el abogado Jorge Vargas Martnez, en representacin del
demandante Moiss Vergara Guzmn en contra de la sentencia de catorce de marzo de
dos mil ocho , escrita a fojas 110 siguientes, la que se invalida y se reemplaza por la que
se dicta a continuacin, sin nueva vista, pero separadamente.
Regstrese.
N 1890-08.-.
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema por los Ministros Sres. Milton Juica
A., Sergio Muoz G., Sra. Margarita Herreros M., Sres. Juan Araya E. y Guillermo Silva
G.
VISTOS:
454
precio declarado en la escritura es diverso del real, puesto que acordaron i ndicar que
corresponda a $ 1.000.000 para pagar un honorario menor al notario. En efecto el precio
fue de $ 5.831.500, que se enter en la siguiente forma: a) $ 1.000.000 pagado al
momento de de suscribir la escritura de venta; b) $ 3.000.000 con la dacin en pago de un
minibs marca Hunday, modelo Grace 2.5, ao 1990, patente RP-5458, sin que se
efecte la transferencia a la fecha por negativa del actor a suscribir el contrato; c) $
631.500 destinado al pago de contribuciones impagas, que se desglosa en $ 264.556
correspondiente a las impagas a octubre de 2002 y $ 367.500 del convenio de pago
suscrito con Tesorera el 25 de agosto de 2002, pagadero en 12 cuotas, cuya ltima
mensualidad se pag el 31 de julio de 2002; d) $ 1.200.000 pagadero el 25 de enero de
2003, para lo cual se acept por su parte letra de cambio y cuyo cobro fue demandado en
los autos rol N 2710 del mismo tribunal.
Si bien el artculo 1698 del Cdigo Civil establece: "Incumbe probar las obligaciones o su
extincin al que alega aquellas o sta", lo cierto es que el desarrollo de la doctrina ha
redefinido el onus probandi, expresando que corresponde la carga probatoria a quien
reclama del rgano jurisdiccional la declaracin de un derecho, puesto que debe justificar
los hechos que constituyen los supuestos de existencia y validez de la pretensin. Del
mismo modo, le asiste a quien sustenta la oposicin, acreditar los hechos fundantes de la
misma, esto es, que los sucesos que impiden, modifican, transforman o extinguen la
pretensin. Son los presupuestos de la pretensin, en este caso de la lesin enorme, los
que corresponde probar al actor y aquellos que tienden a desvirtuarlos son de cargo del
demandado, esto es, que el precio tiene un importe distinto al expresado en la escritura
456
Quinto: Que las partes se encuentran acordes que con fecha cinco de diciembre de dos
mil dos, Moiss Vergara Guzmn vendi a Luis Vergara Guzmn, el sitio nmero doce del
loteo Posadas de Huara, de la comuna de Huara, Provincia de Iquique, en que se declar
que el precio fue de un milln de pesos. La controversia se produce en cuanto a los
hechos, al sostener el actor que el nico precio acordado fue el declarado y por su parte
el demandado afirma que ste fue de $ 5.831.500. Complementa la discusin el hecho de
determinar el costo real del inmueble y la valoracin que ste tiene para efectos del pago
del impuesto territorial.
Sptimo: Que teniendo en cuenta la prueba rendida por las partes, relacionada en el fallo
de primer grado, en especial la prueba confesional del demandado antes aludida, es
posible determinar conforme a la valoracin individual y comparativa de los medios
probatorios, adems, de lo sustentado por el actor en su demanda, que la propiedad raz
vendida tena a Diciembre de 2002 un avalo por parte del Servicio de Impuestos
457
Octavo: Que respecto de la veracidad de las declaraciones que expresan las partes en los
instrumentos pblicos, el artculo 1700 del Cdigo Civil dispone que hacen plena prueba
"contra los declarantes", en la medida que no se demuestre lo contrario. De este modo, al
sostenerse por el actor que el precio de la compraventa del bien raz fue la suma de $
1.000.000; cantidad que coincide con la expresada en la clusula tercera del contrato que
consta en la escritura pblica de fecha 5 de diciembre de 2002, y al no producirse prueba
de contrario que tienda a desvirtuarla en los trminos exigidos por el legislador en el
artculo 429 del Cdigo de Procedimiento Civil, corresponde establecer que el precio del
contrato de compraventa celebrado por el demandante y demandado fue de $ 1.000.000.
Noveno: Que este Tribunal tiene en consideracin que los requisitos de la lesin enorme
estn constituidos: a) que la venta materia del juicio sea susceptible de rescisin por
lesin enorme (art.1891); b) que la obligacin que se declare por la sentencia sea
susceptible de ser cumplida, esto es, que la cosa vendida no haya sido enajenada por el
comprador y que tampoco haya perecido fortuitamente en poder del comprador (art.
1893); c) que la accin se entable dentro de plazo legal y que dicha prescripcin, en su
caso, no sea alegada (art. 1896); d) que, en el caso de autos, con motivo de la venta el
vendedor haya sufrido lesin y que esta lesin sea enorme (art.1889). Sin embargo, la
discusin se plantea en relacin con este ltimo presupuesto.
Dcimo: Que fundamentalmente y para los efectos del anlisis del caso, corresponde
expresar que el contrato de compraventa es bilateral, oneroso y conmutativo, puesto que
genera obligaciones para las dos partes y tiene por objeto la utilidad de ambos
contratantes, gravndose cada uno a beneficio del otro, como, adems, se obligan a
realizar una prestacin, cuyo objeto consiste bsicamente en dar una cosa y pagar el
precio; prestaciones que se miran como equivalentes. Lo anterior tiene su explicacin en
el antecedente que en los contratos bilaterales la causa de la obligacin de un contratante
es el objeto de la obligacin del otro, que por el hecho de ser, adems, conmutativos
causa y objeto deben ser equivalentes, esto es de una entidad similar, objetivamente
apreciadas.
La lesin se produce cuando se altera la ltima cualidad, esto es cuando las prestaciones
no permiten ser calificadas como equivalentes. Esta lesin permite ser calificada de
enorme por parte del vendedor, "cuando el precio que recibe es inferior a la mitad del
justo precio de la cosa que vende" (art. 1889 del Cdigo Civil).
458
Resulta determinante precisar que el justo precio debe ser establecido en concreto, pero
conforme a parmetros objetivos, conforme a cierta opinin comn y generalmente
aceptada, respetando las circunstancias de tiempo y espacio, esto es, a la fecha del
contrato y respecto de la propiedad ubicada en Huara y ms precisamente el sitio 12 del
Loteo Posadas de Huara.
Undcimo: Que constituye un antecedente relevante para los efectos de precisar el justo
precio la Ley 17.235 que establece el impuesto territorial, cuyo objeto es gravar los bienes
races con una contribucin a favor del erario nacional, en que la tasacin la efecta el
Servicio de Impuestos Internos bajo parmetros objetivos y que se mantiene en forma
actualizada, en que es el propio contribuyente quien puede participar en ella presentando
una declaracin descriptiva del inmueble e incluso reclamar posteriormente del avalo,
segn lo regula el artculo 149 y siguientes del Cdigo Tributario. Es la rigurosidad de este
procedimiento, como los derechos que se conceden al contribuyente, los que permiten al
legislador utilizar en diferentes materias dicha regulacin. Es as que el artculo 20, letra b)
de la Ley de Impuesto a la Renta dispone de un sistema para calcular la renta presunta
bajo los siguientes trminos: "Los contribuyentes propietarios o usufructuarios de bienes
races agrcolas, que no sean sociedades annimas y que cumplan los requisitos que se
indican ms adelante, pagarn el impuesto de esta categora sobre la base de la renta de
dichos predios agrcolas, la que se presume de derecho es igual al 10% del avalo fiscal
de los predios. Cuando la explotacin se haga a cualquier otro ttulo se presume de
derecho que la renta es igual al 4% del avalo fiscal de dichos predios."
De igual manera el artculo 486 del Cdigo de Procedimiento Civil dispone, que para los
efectos de tasar y vender en pblica subasta una propiedad: "La tasacin ser la que
figure en el rol de avalos que est vigente para efectos de la contribucin de haberes, a
menos que el ejecutado solicite que se haga nueva tasacin".
Estos antecedentes legislativos resultan suficientes para determinar que, ante la ausencia
de otros elementos de juicios relevantes y que otorguen certeza sobre el valor de la
459
propiedad, el avalo fiscal efectuado por el Servicio de Impuestos Internos para el pago
de las contribuciones de bienes races, representa el justo precio de los inmuebles, en
relacin al cual ha de efectuarse la comparacin del valor pagado realmente, con el objeto
de calificar la existencia de una lesin inferida al vendedor.
Duodcimo: Que en el caso de autos se tendr por justo precio la suma de $ 10.560.080
y, que para los efectos de determinar si existi lesin, como para calificarla de enorme, se
tendr en consideracin que el comprador pag la suma de $ 1.000.000.
Dcimo tercero: Que cabe consignar que el justo precio que se ha fijado en estos autos,
esto es la cantidad de $10.560.087.-, ha de tenerse en consideracin en relacin a lo
dispuesto en el artculo 1890 del Cdigo Civil, el que permite al comprador contra quien se
pronuncia la recisin, a su arbitrio, consentir en ella o completar el justo precio con
deduccin de una dcima parte.
Y visto adems lo dispuesto en los artculos 186 y siguientes del Cdigo de Procedimiento
Civil, se revoca la sentencia de dos de abril de dos mil siete, escrita a fojas 88 y siguientes
y en su lugar se decide que se acoge la demanda de fojas 7 y en consecuencia se declara
que:
460
dichas inscripciones.
N 1890-08.-.
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema por los Ministros Sres. Milton Juica
A., Sergio Muoz G., Sra. Margarita Herreros M., Sres. Juan Araya E. y Guillermo Silva
G.
461
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Teora de la Imprevisin.
C. Suprema
10 y 11.
C. Suprema
14 y 15.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
462
Finalmente se invoca el artculo 1546, que exige el cumplimiento del contrato de buena fe,
y se dice que el acreedor si acosa a su deudor para que cumpla, aunque ello le signifique
un perjuicio desconsiderado, no est de buena fe. Pero desde luego en autos, el acreedor
463
pagar. Este razonamiento merece ser analizado. En resumen, la demandante dice que un
demandado de mala fe aprovechndose del sistema procesal podra dilatar el
cumplimiento y as aprovecharse de los frutos de lo adeudado. Si ese es el razonamiento,
entonces, a contrario sensu, tambin parecera un incentivo perverso lo opuesto, es decir,
que un demandante, aprovechndose tambin del sistema procesal imperante, retardara
el juicio por medio de incidentes y recursos, solamente para que transcurriera ms tiempo
entre la fecha en que presuntamente la obligacin se hizo exigible y la declaratoria de la
obligacin, que sera aprovechada con efecto retroactivo siguiendo la tesis de la
demandante, por lo cual mientras ms tiempo transcurra, ms expectativa de ganancias
tendra en base a un inters tomando una fecha de cumplimiento de la obligacin
declarada en una sentencia judicial de forma retroactiva.
De otro lado la demandante, en su libelo a foja 8 vuelta solicita "...ms los intereses
corrientes que correspondan, o los que S.S. determine, devengados desde la fecha en
que la demandada debi cumplir su obligacin, esto es, el 10 de noviembre de 2006, o
desde la fecha que S.S. determine, hasta la fecha en que de cabal cumplimiento a su
obligacin, todo ello con costas." (sic), lo cual quiere decir que la demandante facult
expresamente a los tribunales de primera y segunda instancia a determinar la fecha
desde la que correran los intereses, por lo cual la decisin de la I. Corte de Valparaso no
slo se encuentra dentro de la legalidad derecho objetivo, sino que dentro de la
prudencia y la equidad, derecho como equivalente a justicia, como portador del valor
justicia por lo cual no cabe ms que rechazar las argumentaciones de la demandante en
cuanto a la primera infraccin denunciada;
465
REGLA .
a.- El artculo 1545 del Cdigo Civil excluye la teora de la imprevisin, pues el contrato no
puede ser dejado sin efecto, y con menos razn an modificado, si no es por voluntad de
las partes los jueces en materia civil no tienen otras facultades que las que se les han
otorgado, y nadie les ha dado la de modificar las convenciones Ren Abeliuk
Manasevich. Las Obligaciones Editorial Jurdica de Chile, Tercera Edicin, ao 1993, p.
705. Una parte de la doctrina ha argumentando que la teora de la imprevisin est
acogida en el artculo 1560 del Cdigo Civil sealando que "en la interpretacin del
contrato debe buscarse la intencin de las partes, y evidentemente el deudor no pudo
haber tenido la de obligarse en forma que el cumplimiento le sea exageradamente
gravoso. Esta tesis olvida que el precepto se refiere a la intencin de ambos contratantes,
y naturalmente la voluntad del acreedor es que se cumpla la obligacin.
Finalmente se invoca el artculo 1546, que exige el cumplimiento del contrato de buena fe,
y se dice que el acreedor si acosa a su deudor para que cumpla, aunque ello le signifique
un perjuicio desconsiderado, no est de buena fe. Pero desde luego en autos, el acreedor
no ha intervenido en el imprevisto que hace ms gravoso el cumplimiento, y si realmente
lo hubiera hecho no necesitara el deudor la imprevisin para defenderse. Por ltimo, el
Cdigo explica tambin que: "el contrato obliga, adems de lo que se expresa, a lo que le
pertenece por su naturaleza, por la ley o por la costumbre; y en ninguna de ellas aparece
la imprevisin" (ob.cit. pg. 705706)
b.- El artculo 16 de la ley 18.010 sobre operaciones de crdito de dinero dispone que: "El
deudor de una operacin de crdito de dinero que retarda el cumplimiento de su
obligacin, debe intereses corrientes desde la fecha del retardo y a las tasas que rijan
durante ese retardo, salvo estipulacin en contrario o que se haya pactado legalmente un
inters superior", por lo cual habindose seguido un juicio sumario donde en definitiva los
tribunales debieron declarar la existencia misma de una obligacin el pago del honorario
de xito, es necesario concordar con el criterio de la Corte de Apelaciones de
Valparaso, expuesto en el considerando decimoquinto de su sentencia de fecha siete de
abril de dos mil ocho, al considerar que los intereses corrientes deben empezar a correr
slo desde la fecha en que la demandada se constituya en mora de pagar la suma que se
ordena solucionar por medio de dicha sentencia, ya que al ser declarada en dicha fecha,
desde ese momento se hizo legalmente exigible.
CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 09 septiembre 2009. G.J. N 351, p.104. L.P. N 42607.
466
Corte Suprema
Fallo:
VISTO:
A fs. 3, comparece don Juan Carlos Osorio Johannsen, abogado, domiciliado en Avenida
Libertad N 1405, oficina 1702, Via del Mar, en representacin de South Andes Capital
S.A., en adelante denominada indistintamente tambin como "el Asesor", sociedad
annima del giro asesora, con domicilio en calle Enrique Foster Sur N 39, piso 8, Las
Condes, Santiago; e, interpone demanda de cobro de honorarios en juicio sumario en
contra de Empresa Portuaria Valparaso, en adelante "EVP", empresa estatal
467
representada por don Harald Oscar Helmut Jaeger Karl, ingeniero naval elctrico, ambos
con domicilio en Avenida Errzuriz N 25, Valparaso, para que se declara que EPV pague
al ASESOR.
Funda su demanda sealando que en agosto de 2003, EPV convoc a licitacin pblica
para la contratacin de un asesor Financiero para el Diseo de Modelo de Negocios, y el
Diseo y Desarrollo de la Licitacin Pblica para el Emprendimiento del Proyecto Borde
Costero Barn en Puerto Valparaso, en adelante "la Licitacin".
Segn el prrafo 1.4 de las Bases, el objeto de las asesoras de la Licitacin consisti en
apoyar a EPV en la definicin del denominado Proyecto Costero Barn; en la definicin y
diseo del o los modelos para su puesta en marcha, y en la preparacin y desarrollo del o
los procesos de licitacin pblica de la puesta en marcha de todo o parte de ese Proyecto.
De conformidad con las bases esa asesora deba presentarse en dos etapas. El primer
plazo para esa etapa sera de 120 das.
En su oferta Econmica los oferentes deban proponer como honorarios por los Primera
Etapa una suma fija, que no poda superar el equivalente a 2.100 UF. Empresa Portuaria
Valparaso pagara este honorario contra entrega y aprobacin de un informe conteniendo
los resultados de las actividades realizadas durante la Primera Etapa.
En su oferta econmica, deban indicar el valor neto de base de los honorarios de xito
por la licitacin por el proyecto completo. Este honorario correspondiente a la Segunda
Etapa se pagara slo si los procesos de licitacin respectivos culminaren con la firma del
contrato correspondiente, y su monto sera el resultado de multiplicar el valor neto base
del honorario de xito por el respectivo Factor de nmero de oferta valida y por el
cuociente entre el rea involucrada en la licitacin y el rea total, disponible para el
Proyecto que segn EPV lo estableci en las Bases, es de 11,83 hectreas. Si el proceso
no culminare con, la firma del contrato EPV pagara como nico honorario por la Segunda
Etapa el equivalente a 500 UF.
En su Oferta econmica South Andes Capital, propuso: 2.100 UF como precio fijo del
honorario correspondiente a la primera Etapa; y 28.500 UF como valor neto Base para los
efectos del clculo del monto de los honorarios correspondientes a la Segunda Etapa.
468
La Asesora correspondiente a la Primera Etapa se prolong por 407 das, esto es, hasta
el 15 de diciembre de 2004, ya que a solicitud de EPV, las partes firmaron los Addenda N
001/04, 002/04 y 003/04 de 3 de marzo, 30 de julio y 10 de septiembre de 2004, por los
que se prorrog el plazo de 120 a 270 das, de 270 a 315 das y de 315 a 407 das.
Esta primera Etapa culmin con la entrega y aprobacin del informe correspondiente, y
EPV pag a South Andes Capital S.A., el honorario equivalente a 2.100 UF previsto en el
Contrato de Asesora para esta Primera Etapa.
El asesor no solicit mi recibi ningn honorario mayor por el mayor tiempo que debi
dedicar a la Asesora.
En consecuencia, las obligaciones tanto del Asesor como de EPV correspondiente a esta
Primera Etapa se encuentran totalmente cumplidas.
La ejecucin de la Segunda Etapa del contrato de Asesora, EPV resolvi la totalidad del
rea involucrada en el Proyecto Borde Costero Barn como un todo, en vez de realizar
licitacin parciales, por lo anterior, slo hubo un proceso de licitacin, y por lo tanto una
sola Segunda Etapa en la South Andes Capital S.A. prest sus servicios de Asesora.
Esta Segunda Etapa culmin con la firma del Contrato de Concesin y Arrendamiento
entre EPV y Plaza Valparaso S.A., que consta de la escritura pblica otorgada el 10 de
noviembre de 2006, ante Notario, con ello se dio cumplimiento a la nica condicin
estipulada y, en consecuencia, ha quedado devengando el honorario de xito pactado
para la segunda Etapa.
Los factores que determinan el monto del honorario de xito son: el "Valor Neto Base de
Honorario de xito Proyecto Borde Costero Barn", de conformidad con lo estipulado en
la clusula TerceraUno del Contrato de Asesora N 74/2003, asciende a 28.500 UF;
469
El "Factor de Nmero de Ofertas Vlidas", habindose presentada slo una oferta vlida a
la licitacin, segn el cuadro incluido al comienzo de la pgina 3 del contrato de Asesora
N 74/2003, el que es igual a 1,00.
Por tanto el honorario de la Segunda Etapa es igual a 28.500 UF por 1 por 3,68075 (que
equivale dividir las 43,5433 hectreas involucradas en el Contrato de Concesin y
Arrendamiento por 11,83 hectreas), lo que da un total de 104.901,37 U.F.
Al final de la clusula TerceraDos del contrato de Asesora N 74/ 2003 se estipul que
los honorarios pagados por EPV por el desarrollo de la Primera Etapa, que ascendieron a
2.100 UF, deben ser descontados de los honorarios de xito correspondiente a la primera
licitacin que culmine con la firma del contrato.
Por lo anterior, del honorario de xito de 104.901,37 UF, debe descontarse la cantidad de
2.100 UF pagadas por concepto de honorarios de la Primera Etapa, por lo que la
obligacin dependiente de cumplimiento por parte de EPV asciende a la cantidad de
102.801,37 UF.
470
A fs. 71, se llev efecto el comparendo de estilo, con la presencia de los apoderados de
ambas partes.
La parte contesta la demanda segn escrito que rola a fs. 60, expresando que en las
Bases de licitacin, claramente se indic que el objeto final de la asesora consiste en
"permitir alcanzar los objetivos definidos", lo cual debe interpretarse como que el contrato
que une a las partes es un contrato con resultado garantido o tambin denominado de
xito, de lo cual, a su entender, debe concluirse que si no hay xito, no hay obligacin de
pago del precio pactado en la asesora.
Por lo anterior, dice la demandada que la sola firma del contrato, no es la culminacin del
proceso de licitacin.
Dice la demandada que creer que el proceso de licitacin ha culminado revela un grave
error conceptual de la demandante, ya que el Contrato de Concesin y Arrendamiento, es
solo un importante paso, pero no la culminacin del proceso de licitacin, y por ello no se
ha devengado el honorario de xito.
Agrega la demandada que el Proyecto Puerto Barn, an no puede ser considerado como
exitoso.
Agrega que la razn del rechazo de la factura, radic en que el monto cobrado no
corresponda a lo establecido en el contrato, toda vez que la condicin de pago
(estipulada como la culminacin del proceso de licitacin) an no se ha verificado, de
manera que el valor de la asesora no se ha devengado en los trminos establecidos en el
contrato de asesora.
471
A fs. 86 y fs. 108, rola interlocutoria de prueba, rindiendo testimonial ambas partes.
A fs. 174, absolvi posiciones el representante legal de la demandada, don Harald Jaeger
Karl, al tenor del pliego que rola de fs. 171 a fs. 172.
CONSIDERANDO:
PRIMERO: Que la parte Demandante a fs. 73, fs. 165 y fs. 178, objet los documentos
acompaados por la demandada a fs.32, 34, 128 y 156, que consisten en copias simples
de dos fallos judiciales, originales en que consta la oferta tcnica y oferta econmica
elaboradas y presentadas al proceso de licitacin, e informe en Derecho (custodia N
451007).
SEGUNDO: Que funda el reproche en que las dos copias de fallos judiciales son
inoponibles en la presente causa, y porque, adems, no consta su autenticidad e
integridad.
Que en relacin a los documentos de oferta tcnica y oferta econmica, el reproche radica
en que se trata de una presentacin incompleta, pues ambas ofertas forman un todo con
el acpite denominado "Antecedentes Generales".
472
TERCERO: Que en relacin a los documentos de fs. 32, 34, 128 (custodia N 439007), el
tribunal, atendida la naturaleza de tales documentos, acoger las objeciones, sin perjuicio
del valor probatorio que, en definitiva, se les pueda asignar, en concordancia, con los
dems elementos allegados al proceso.
QUINTO: Que la parte Demandada, objet a fs.122, los documentos acompaados por la
Demandante a fs. 115, a saber: a) Copia de Bases de Licitacin de la Asesora Financiera
para el Diseo del Modelo de Negocios, y el Diseo y Desarrollo de la licitacin pblica
para el emprendimiento del proyecto Borde Costero Barn en Puerto de Valparaso, b)
copia de pgina "Plan de apertura y transformacin de Borde Costero de Valparaso.
Puerto Barn", c) publicacin en Diario El Mercurio de Valparaso, de 27 de marzo de
2007, y d) publicacin en Diario El Mercurio de 7 de diciembre de 2006. (custodia N 431
007),
OCTAVO: Que el tribunal, tendr presente que por el hecho de haber confeccionado el
testigo, un informe que forma parte de la estrategia o Defensa de la parte que lo presenta,
ello le resta imparcialidad a sus dichos, puesto que se colige que hay un inters inmediato
en el resultado de la presente causa, en cuanto sta sea resuelta a favor de quien le
efectu tal encargo. Por lo anterior, la tacha ser acogida.
473
NOVENO: Que la parte Demandada, a fs.234 y 240, tach a los testigos de la parte
Demandante, Srs. Mario Lecaros Snchez y Sergio Milic Barros, por la causal del artculo
358 N 6 del Cdigo de Procedimiento Civil, respecto del testigo Lecaros y por la causal
de los N 5 y 6 del Cdigo de Procedimiento Civil, respecto del testigo Milic.
UNDCIMO: Que a fs. 3, comparece don Juan Carlos Osorio Johannsen, abogado,
domiciliado en Avenida Libertad N 1405, oficina 1702, Via del Mar, en representacin de
South Andes Capital S.A., en adelante denominada indistintamente tambin como "el
Asesor", sociedad annima del giro asesora, con domicilio en calle Enrique Foster Sur N
39, piso 8, Las Condes, Santiago; e interpone demanda de cobro de honorarios en juicio
sumario en contra de Empresa Portuaria Valparaso, en adelante "EVP", empresa estatal
representada por don Harald Oscar Helmut Jaeger Karl, ingeniero naval elctrico, ambos
con domicilio en Avenida Errzuriz N 25, Valparaso, para que se declara que EPV pague
al ASESOR.
Funda su demanda sealando que en agosto de 2003, EPV convoc a licitacin pblica
para la contratacin de un asesor Financiero para el Diseo de Modelo de Negocios, y el
Diseo y Desarrollo de la Licitacin Pblica para el Emprendimiento del Proyecto Borde
Costero Barn en Puerto Valparaso, en adelante "la Licitacin".
La licitacin qued regida por las bases de licitacin y por las circulares 1, 2, 3, 4 y 5, en
adelante en conjunto "las Bases".
Segn el prrafo 1.4 de las Bases, el objeto de las asesoras objeto de la Licitacin
consisti en apoyar a EPV en la definicin del denominado Proyecto Costero Barn; en la
definicin y diseo del o los modelos para su puesta en marcha, y en la preparacin y
474
desarrollo del o los procesos de licitacin pblica de la puesta en marcha de todo o parte
de ese Proyecto.
De conformidad con las bases esa asesora deba presentarse en dos etapas. El primer
plazo para esa etapa sera de 120 das. La segunda Etapa de cada uno de los procesos
de licitacin identificados en la Primera etapa, se entenderan iniciada 30 das despus de
la fecha de notificacin al Asesor de la decisin de EPV de dar inicio al desarrollo de la
Segunda Etapa respectiva y terminara con la adjudicacin y firma del contrato
correspondiente, o bien, cuando en los procesos de licitacin no se hubieren recibido
ofertas o las ofertas recibidas no se ajustasen a las bases respectivas. En el hecho hubo
una sola Segunda Etapa y un solo proceso de licitacin.
En su oferta Econmica los oferentes deban proponer como honorarios por los Primera
Etapa un suma fija, que no poda superar equivalente a 2.100 U.F., Empresa Portuaria
Valparaso pagara este honorario contra entrega y aprobacin de un informe conteniendo
los resultado de las actividades realizadas durante la Primera Etapa.
En su oferta econmica, deban indicar el valor neto de base de los honorarios de xito
por la licitacin por el proyecto completo. Este honorario correspondiente a la Segunda
Etapa se pagara slo si los procesos de licitacin respectivos culminaren con la firma del
contrato correspondiente, y su monto sera el resultado de multiplicar el valor neto base
del honorario de xito por el respectivo Factor de nmero de oferta vlida y por el
cuociente entre el rea involucrada en la licitacin y el rea total disponible para el
Proyecto que segn EPV, es de 11,83 hectreas. Si el proceso no culminare con la firma
del contrato EPV pagara como nico honorario por la Segunda Etapa el equivalente a
500 UF.
En su Oferta econmica South Andes Capital, propuso: 2.100 UF como precio fijo del
honorario correspondiente a la primera Etapa; y 28. 500 UF como valor neto Base para
los efectos del clculo del monto de los honorarios correspondientes a la Segunda Etapa.
La clusula tercera de ese contrato de Asesora, en lo que dice relacin con el monto de
los honorarios pactados, fue, redactada por EPV, y consiste en:
475
Por la primera etapa, se pact un honorario fijo de 2.100 UF, que EPV se oblig a pagar
contra entrega y aprobacin de un informe contenido de los resultados de las actividades
realizadas durante la primera etapa. El pago de este honorario fijo no qued sujeto a
plazo alguno.
Por la segunda etapa, si el o los procesos de licitacin no culminaban con la firma del
contrato correspondiente, EPV slo pagara un honorario de 500 UF. Si, en cambio, el o
los procesos de licitacin culminaren con la firma del contrato respectivo debera pagarse
un honorario de xito, cuyo monto ser igual al resultado de multiplicar el valor Neto Base
del Honorario de xito Proyecto Borde Costero Barn, uno del contrato de asesora, que
es de 28.500, por el respectivo "Factor de Nmero de Oferta Vlidas", y por el cuociente
entre el rea involucrada en la licitacin y el rea total disponible para el Proyecto que
para todos los efectos es igual a 11, 83 hectreas. No se pact plazo alguno para el pago
de este honorario.
La Asesora correspondiente a la Primera Etapa se prolong por 407 das, esto es, hasta
el 15 de diciembre de 2004, ya que a solicitud de EPV, las partes firmaron los Addenda N
001/04, 002/04 y 003/04 de 3 de marzo, 30 de julio y 10 de septiembre de 2004, por los
que se prorrog el plazo de 120 a 270 das, de 270 a 315 das y de 315 a 407 das.
Esta primer Etapa culmin con la entrega y aprobacin del informe correspondiente, y
EPV pag a South Andes Capital S.A., el honorario equivalente a 2.100 UF previsto en el
Contrato de Asesora para esta Primera Etapa.
El asesor no solicit mi recibi ningn honorario mayor por el mayor tiempo que debi
dedicar a la Asesora.
En consecuencia, las obligaciones tanto del Asesor como de EPV correspondiente a esta
Primera Etapa se encuentran totalmente cumplidas.
La ejecucin de la Segunda Etapa del contrato de Asesora, EPV resolvi la totalidad del
rea involucrada en el Proyecto Borde Costero Barn como un todo, en vez de realizar
licitacin parciales, por lo anterior, slo hubo un proceso de licitacin, y por lo tanto una
sola Segunda Etapa en la South Andes Capital S.A. prest sus servicios de Asesora.
Esta Segunda Etapa culmin con la firma del Contrato de Concesin y Arrendamiento
entre EPV y Plaza Valparaso S.A., que consta de la escritura pblica otorgada el 10 de
noviembre de 2006, ante notario; con ello se dio cumplimiento a la nica condicin
476
Los factores que determinan el monto del honorario de xito son: el "Valor Neto Base del
Honorario de Exito Proyecto Borde Costero Barn", de conformidad con lo estipulado en
la clusula TerceraUno del Contrato de Asesora N 74/2003, asciende a 28.500 UF;
El "Factor de Nmero de Ofertas Vlidas", habindose presentada slo una oferta vlida a
la licitacin, segn el cuadro incluido al comienzo de la pgina 3 del contrato de Asesora
N 74/2003, el que es igual a 1,00.
Por tanto el honorario de la Segunda Etapa es igual a 28.500 UF por 1 por 3,68075 (que
equivale dividir las 43,5433 hectreas involucradas en el Contrato de Concesin y
Arrendamiento por 11,83 hectreas), lo que da un total de 104.901,37 U.F.
Al final de la clusula TerceraDos del contrato de Asesora N 74/ 2003 se estipul que
los honorarios pagados por EPV por el desarrollo de la Primera Etapa, que ascendieron a
2.100 UF, deben ser descontados de dos honorarios de xito correspondiente a la primera
licitacin que culmine con la firma del contrato.
Por lo anterior, del honorario de xito de 104.901,37 UF, debe descontarse la cantidad de
2.100 UF pagadas por concepto de honorarios de la Primera Etapa, por lo que la
obligacin dependiente de cumplimiento por parte de EPV asciende a la cantidad de
102.801, 37 UF.
La parte demandada contesta la demanda segn escrito que rola a fs. 60, expresando
que sta deber ser rechazada, con expresa condena en costas, por improcedente.
Seala que en las Bases de licitacin, claramente se indico que el objeto final de la
asesora consiste en "permitir alcanzar los objetivos definidos", lo cual debe interpretarse
como que el contrato que une a las partes es un contrato con resultado garantido, o
tambin denominado de xito, de lo cual, a su entender, debe concluirse que si no hay
xito, no hay obligacin de pago del precio pactado en la asesora.
Por lo anterior, dice la demandada que la sola firma del contrato, no es la culminacin del
proceso de licitacin.
Agrega la demandada que el Proyecto Puerto Barn, an no puede ser considerado como
exitoso.
Agrega que la razn del rechazo de la factura, radic en que el monto cobrado no
corresponda a lo establecido en el contrato, toda vez que la condicin de pago
(estipulada como la culminacin del proceso de licitacin) an no se ha verificado, de
manera que el valor de la asesora no se ha devengado en los trminos establecidos en el
contrato de asesora.
Dice la demandada que luego de haber pretendido cobrar slo 21.120 UF, ahora con
abusiva intencin, eleva la demandante, su cobro a 102.801,37 UF, lo que no tiene
ninguna justificacin.
Agrega que esta frmula es la que efectivamente se contiene en el contrato para calcular
el honorario de xito, y fue concebida bajo una primera premisa en la cual el asesor
financiero consideraba la realizacin de varios procesos de licitacin y varios contratos,
por distintos espacios fsicos.
individualmente un rea igual o superior a tres hectreas, entonces para los efectos de
determinar los honorarios de xito se considerara su rea respectiva".
Agrega que el espritu de las partes al establecer la frmula de clculo del honorario de
xito fue, que en el evento que se optara por varios procesos de licitacin, que el
honorario fuera pagado en forma proporcional a la superficie licitada, de modo que el
cuociente de dividir el rea total por rea involucrada, fuera menor de uno, y en el caso
que se hiciera slo un proceso de licitacin dicho cuociente fuera igual a uno.
Agrega que en la parte que a la actora le conviene olvida que el rea del terreno ha
variado, pero en la otra parte se ajusta plenamente a las modificaciones que el proyecto
final del contrato de concesin sufri.
480
Dice que se trataba de asesora financiera y los honorarios pactados se dividieron en dos
fases o etapas. La primera fase o etapa era la asesora misma y la segunda fase era la
celebracin del contrato, en este caso con Mall Plaza.
En cuanto a monto, declara que stos eran de 2.100 (dos mil cien) UF, para la primera
fase y de 28.500 UF (veintiocho mil quinientas) para la segunda fase, o la suma que
resultare tras un clculo que consta en el contrato.
Contrainterrogado, declara que le consta que los servicios fueron realmente prestados,
pues profesionales de la Demandante trabajaron largo tiempo en el tema, y tambin
porque el contrato de asesora, en su primera fase, fue pagado. Dice que lo declarado le
consta por lo que le manifestaron los mismos profesionales que trabajaban en ello.
Declara que el contrato con Mall Plaza se firm un buen tiempo despus que el contrato
de Asesoras.
Declara que el contrato entre las partes de este juicio result de una adjudicacin en un
proceso de licitacin pblica.
481
Repreguntado, declara que la nica condicin para la exigibilidad del pago, era la firma
del contrato. Que le consta que ello se cumpli, es decir la firma del contrato con el cual
concluy el proceso de licitacin.
Declara que la asesora pactada en el contrato respectivo, que l reviso, tena como
objetivo el hacer culminar el proceso de licitacin en la firma de un contrato para el
desarrollo o licitacin del Muelle Barn.
Seguidamente, el testigo Sergio Milic Barros, declara que le consta que las partes de
autos celebraron un contrato de Asesora para la licitacin del proyecto Puerto Barn, y
que le consta porque vio el contrato firmado por ambas partes.
Declara que los servicios consistan en asesorar a la demandada en el diseo del modelo
de negocio, en el diseo y desarrollo de la licitacin del Puerto Barn.
Declara que los Honorarios pactados se dividan, entre aquellos pactados para la fase uno
y para la fase dos. Para la fase uno se pacto un honorario de 2.100 UF, que sera
deducible del honorario de la fase dos.
Agrega que para la fase dos, se pact un honorario que resultara de multiplicar el
honorario base de xito, correspondiente a 28.500 UF, por dos factores, el primer factor
sera en funcin al nmero de ofertas vlidas recibidas en la licitacin y tendra un valor
de 1,0 si se reciba slo una oferta vlida o de valores superiores a uno si se reciban ms
de una oferta vlida.
482
Agrega, que el segundo factor multiplicaba al honorario base de xito, era el cuociente
entre el rea involucrada en la licitacin y el rea disponible del proyecto que la
demandada defini como de 11,83 hectreas.
Repreguntado, declara que la asesora constaba de dos fases, la fase uno que consista
ms que nada en el Diseo, que duraba, inicialmente, 120 das, y culminaba con una
presentacin o Informe a la demandada, con las conclusiones de tal fase.
Agrega, que para la fase dos la asesora consisti en coordinar la licitacin del proyecto,
conduciendo la relacin de la demandada con los participantes en la licitacin y tratando
de generar la mayor tensin competitiva durante el proceso de licitacin.
Declara que, segn el contrato de asesora, la segunda Fase concluy con la firma del
contrato de concesin y arrendamiento suscrito por la demandada a fines del ao 2006,
por lo que el desarrollo de la segunda fase fue de aproximadamente dos aos.
Declara que el nmero de ofertas vlidas, segn lo informado por la prensa, fue una sola.
Agrega que el rea involucrada en la licitacin, de acuerdo al informe final de la fase uno,
fue de aproximadamente 42 hectreas. Declara que el tuvo acceso al informe final.
Declara que el inicio del proceso de licitacin el rea disponible para el proyecto, segn
esta se define en el contrato de asesora, era de 11,83 hectreas y el rea que se
estimaba se involucrara en la concesin era de aproximadamente 42 hectreas.
Declara que se desconoca al inicio cual sera el rea involucrada en el proyecto, pero que
al momento de la firma del contrato de asesora, se estableci un factor de ajuste en
funcin del cuociente entre ellas que multiplicara el honorario base de xito.
483
Declara que los servicios prestados en la fase dos seran exigible contra la firma del
contrato mediante el cual la demandada asignara Puerto Barn, segn la licitacin
realizada para tal efecto.
Agrega que tal contrato se firm a fines de 2006, y tal firma era la nica condicin para el
pago de los honorarios por la fase dos.
Que la parte demandante a fs. 115, acompa diversos documentos, a saber: a) Bases
de Licitacin de la Asesora Financiera para el Diseo del Modelo de Negocios, y el
Diseo y Desarrollo de la Licitacin Pblica para el emprendimiento del Proyecto Borde
Costero Barn en Puerto Valparaso, b) Carta enviada por la demandada a la parte
demandante con fecha 21 de octubre de 2003, en la que da cuenta de la adjudicacin de
la licitacin a la Demandante, c) carta enviada por la parte demandante a don Harald
Jaeger Karl, el 22 de diciembre de 2006, d) factura N 00205 de parte demandante a
empresa demandada, e) carta de 28 de diciembre de 2006 de don Harald Jaeger Karl a la
demandante, f) copia de pagina Web "plan de apertura" g) copia autorizada de escritura
pblica de fecha 10 de noviembre de 2006, referida al Contrato de Concesin y
Arrendamiento del Proyecto Puerto Barn, entre la demandada y Plaza Valparaso S.A.,
h) dos publicaciones del diario El Mercurio de Valparaso, y, i) del documento titulado "Del
mar surge un gigante". Documentos guardados bajo el N 431007 de custodia.
Que a fs., 159, la parte Demandante, acompa el documento que consiste en copia de
Declaracin pblica del Directorio de Empresa Portuaria Valparaso, de fecha 13 de
marzo de 2007, de la seccin "archivo noticias" de su sitio Web. Documento no objetado.
Que a fs. 261, la parte demandante acompa copias simples de extractos de varias
Actas de Directorio de la empresa Portuaria Valparaso (86) y una copia simple de
declaracin del Directorio de E.P.V., publicada en el Diario La: Estrella de Valparaso el 13
de marzo de 2007, guardados en custodia bajo el N 951007.
484
De tales documentos fueron objetados a fs.73, los que rolan a fs.32 y 34.
Que la demandada a fs. 128, acompa diversos documentos, a saber, a) copia de Bases
de Licitacin pblica, sobre asesora financiera para el diseo de modelo de negocios y el
Diseo y Desarrollo de la licitacin pblica para el emprendimiento del Proyecto Borde
Costero Barn de agosto de 2003, b) documento original de oferta tcnica presentada en
proceso de licitacin, c) documento original de oferta econmica presentada en proceso
de licitacin, d) copia del informe final de primera etapa de la Asesora, e) copia
autorizada y legalizada el Contrato de Concesin y arrendamiento Proyecto Puerto Barn,
entre Empresa Portuaria Valparaso y la sociedad concesionaria Plaza Valparaso S.A. de
10 de noviembre de 2006, f) Bases de licitacin pblica de 23 de marzo de 2005, con sus
anexos y circulares, g) copias autorizadas de las inscripciones de dominio de los
inmuebles que empresa Portuaria compr a Metro Regional y a Empresa de Ferrocarriles
del Estado, y, h) recortes de prensa. Documentos guardados en custodia bajo el N 439
007.
Slo fueron objetados, a fs.165, los documentos signados con las letras b) y c).
Que la parte demandada, a fs. 153 acompa diversos documentos, a saber: a) copia de
consulta de South Andes Capital S.A. de 1 de septiembre de 2003, b) copia de consulta
efectuada por Deloitte de 1 de septiembre de 2003, c) circulares complementarias Ns 1,
2, 3, 4 y 5, todas del ao 2003. Documentos no objetados.
485
486
Que en lo relativo a la Segunda Etapa, por la cual se demanda, aparecen las partes
pactando un honorario que se pagara "slo si los procesos de licitacin respectivos
culminan con la firma del contrato correspondiente"
En cuanto a monto del referido honorario de xito, las partes lo detallan expresamente en
la clusula tercera, y por no haberse rendido prueba en contrario, el tribunal, en su
oportunidad, estar a ese mrito.
VIGSIMO QUINTO: Que en materia de contratos, cada clusula surte su efecto propio y
natural, sin desatender que ste libremente celebrado, es una ley para cada contratante, y
al tenor de las normas de interpretacin que contempla nuestro ordenamiento, deber
estarse primeramente al tenor literal, toda vez que la referida clusula tercera, en
concepto del tribunal, no requiere mayor interpretacin, en cuanto a que el honorario de
xito de la Segunda Etapa deba pagarse si el proceso de licitacin culminaba con la firma
del respectivo contrato, estando ambas partes contestes en que ello as ocurri el da "10
noviembre de 2006," sin que el devenir de ste pueda oponerse al cumplimiento de los
honorarios libremente pactados en el contrato de Asesora, habida consideracin que tal
487
como lo expresa la actora, y confiesa la demandada (fs. 175, posicin novena dcima), la
referida clusula tercera del contrato de Asesora nunca fue modificada por los
contratantes.
VIGSIMO SEXTO: Que as las cosas, habiendo prestado la actora la Asesora a que se
oblig, a travs de un contrato validamente celebrado y no modificado, en cuanto a forma,
monto y oportunidad de los honorarios, es que el tribunal deber acoger la demanda, (con
expresa condena en costas)
VIGSIMO OCTAVO: Que la prueba que no se hubiere ponderado, en nada altera lo que
se dir en lo resolutivo.
Por estas consideraciones y mrito de lo dispuesto en los artculos 144, 160, 170, 342,
346, 358, 385, y, 680 N 3 del Cdigo de Procedimiento Civil, artculos 19, 1545, 1546 y
1698 de Cdigo Civil y ley N 18.010, de declara:
7. Que por no haber sido totalmente vencida la demandada no hay condena en costas.
ROL N 1222007.
VISTO:
PRIMERO: Que la parte demandada se alza en contra de la sentencia que se revisa que
orden pagar la suma de 102.801, 37 Unidades de Fomento a la parte demandante, por
489
TERCERO: Que se debe tener presente que las bases de licitacin que culminaron en el
contrato de Asesora N 74/2003 entre las partes, fue obra de la demandada, y la
discusin se centra en la clusula tercera de dicho contrato.
SEXTO: Que conforme se lee en la clusula tercera del Contrato de Asesora entre las
partes, denominado N 74/2003, "Los honorarios de xito correspondientes a la o cada
una de las Segundas Etapas se pagarn slo si los procesos de licitacin culminan con la
firma del Contrato correspondiente. En caso contrario EPV apagar al Asesor quinientas
Unidades de Fomento (U.F. 500) por la asesora prestada durante la Segunda Etapa
respectiva...". Es decir el honorario de xito estaba sujeto a que se cumpliera la condicin
de trmino del proceso de licitacin con la suscripcin del contrato de concesin, el que
se realiz por escritura en la fecha ya sealada y con la publicidad de que se dio cuenta
en el proceso. Contrato tenido a la vista de custodia 1442007.
490
SPTIMO: Que las reglas de interpretacin de los contratos establecidas en la ley, son
normas dadas al juez de la causa para que ste determine, resolviendo la controversia
sometida a su conocimiento, el verdadero sentido y alcance de las clusulas estipuladas
por las partes en el contrato de que se trate. La Juez a quo estimando que los
antecedentes aportados al proceso por ambas partes resultan suficientes para hacer el
ejercicio que le manda la ley, concluye dar lugar a la demanda.
Por lo anterior, es que la Juez a quo estim que la claridad del texto, unido a los
antecedentes del proceso, era que la voluntad de los contratantes haba sido clara al
expresarlas escrito en el acto jurdico a que se refieren estos autos.
DCIMO: Que, para los sentenciadores resulta muy importante el conocimiento que
tenan las partes del real sentido de la clusula tercera del, contrato ya aludido. En efecto,
por parte de EPV, a fs. 261 se acompaa Acta de la Sesin Extraordinaria N 39 del
Directorio de EPV, de fecha 1 de junio de 2006, en que claramente el presidente del
Directorio le plantea a ste, ,la situacin que se produce con los honorarios a pagar, al
asesor al contemplarse una clusula de salida para el adjudicatario de la licitacin, ya que
"se pact un honorario de xito, ascendente a UF 28.500 (neto) que se pagara si el
proceso de licitacin culmina con la firma del contrato de concesin correspondiente...
coincidiendo en la necesidad de adecuar el Contrato suscrito con los Consultores, en
trminos de poder asociar el pago de sus honorarios no a la firma del contrato de
concesin sino al hecho que se ejerza o no la opcin de salida por parte del
Concesionario", acordando facultar a su Gerente General para adecuar las condiciones de
pago de los honorarios a la firma asesora, conforme la nueva condicin recientemente
referida. Modificacin contractual que no se acredit que se hubiere realizado, sino al
contrario, al absolver la posicin N 10, el Gerente General de EPV (fs. 175) seala "es
efectivo"; posicin que se refera a la efectividad que el contrato Asesora N 74, de 2003
no haba experimentado ninguna modificacin en su clusula tercera.
Por su parte el Gerente de Proyecto de la parte demandada, don Sergio Milic Barros,
seala a fs. 246 "Los servicios brindados en la fase dos seran exigibles contra la firma del
491
contrato mediante el cual EPV asignara Puerto Barn segn la licitacin realizada para tal
efecto. Tal contrato se firm a fines de 2006 segn pude apreciar en la prensa, en
declaraciones de EPV y se celebr con la presencia de la Presidenta a la zona de Puerto
Barn, con lo que se cumpli la nica condicin establecida en el contrato de asesora
para el pago del honorario por la fase dos".
As, conforme al Anexo II de las Bases de la Licitacin pblica proyecto Puerto Barn, y el
anexo II Descripcin de reas del Contrato de Concesin y Arrendamiento, se establecen
las siguientes superficies como rea involucrada en la rea A Inicial 112.314 metros
cuadrados; rea Operacional B, 7.000 metros cuadrados; Sector C en sector Barn,
30.000 metros cuadrados; rea opcional D, en costanera del puerto de Valparaso, 18.169
metros cuadrados; rea opcional E, correspondiente a la porcin martima del recinto
portuario localizado en el sector de Barn, 230.600 metros cuadrados; rea opcional F,
492
Por estas consideraciones, y teniendo presente los artculos 186 y siguientes del Cdigo
de Procedimiento Civil se revoca la sentencia de fecha primero de octubre de dos mil
siete, escrita de fs. 332 a 370, en cuanto se hace lugar a la adhesin a la apelacin
interpuesto por la actora a fs. 430, slo en cuanto se condena a la demandada al pago de
los intereses corrientes a partir de la fecha en sta se constituya en mora de pagar la
suma que se ha ordenado en la sentencia una vez que sta quede ejecutoriada. Se
confirma en lo dems apelado.
Regstrese y devulvase.
493
Rol 2.3992007.
VISTO:
En estos autos rol N 1222007, seguidos ante el 1 Juzgado Civil de Valparaso, juicio en
procedimiento sumario, caratulados "South Andes Capital S.A. c/ Empresa Portuaria
Valparaso", don Juan Carlos Osorio Johannsen, abogado, en representacin de South
Andes Capital S.A., dedujo demanda de cobro de honorarios en contra de Empresa
Portuaria Valparaso, representada por don Harald Oscar Helmut Jaeger Karl.
Funda el actor su pretensin sealando que en agosto del ao 2003 Empresa Portuaria
Valparaso convoc a licitacin pblica para la contratacin de un asesor financiero, para
el diseo de un modelo de negocios y el desarrollo de la licitacin pblica para el
emprendimiento del proyecto Borde Costero Barn, en el Puerto de Valparaso.
Manifiesta que segn el prrafo 1.4 de las Bases de Licitacin, el objeto de la asesora
consisti en apoyar a Empresa Portuaria Valparaso en la definicin del denominado
"Proyecto Costero Barn"; en la enunciacin y diseo del o los Modelos para su puesta en
marcha; y en la preparacin y desarrollo del o los procesos de licitacin pblica de
concrecin de todo o parte de ese proyecto.
Expresa que de conformidad a las aludidas bases, la asesora deba presentarse en dos
etapas. El plazo para la primera de ellas sera de ciento veinte das y la segunda parte de
cada uno de los procesos de licitacin identificados en el primer perodo, se entendera
iniciada treinta das despus de la fecha de notificacin al asesor de la decisin de
Empresa Portuaria Valparaso de dar inicio al desarroll de la segunda etapa respectiva y
terminara con la adjudicacin y firma del contrato correspondiente, o bien cuando en los
procesos de licitacin no se hubieren recibido ofertas o las ofertas recibidas no se
ajustaren a las bases respectivas.
Expone que en su oferta econmica los oferentes deban proponer como honorarios por la
primera etapa una suma fija, que no poda superar el equivalente a 2.100 U.F. La
Empresa Portuaria pagara este honorario contra entrega y aprobacin de un informe que
contemplara los resultados de las actividades realizadas durante la primera etapa.
Agrega que en la mencionada oferta econmica los interesados deban indicar, adems,
el valor neto base de los honorarios de xito por la licitacin del proyecto completo. Este
honorario, correspondiente a la segunda etapa, se pagara slo si los procesos de
licitacin respectivos culminaban con la firma del contrato correspondiente y su monto
494
sera el resultado demultiplicar el valor neto base del honorario de xito, por el respectivo
factor de nmero de oferta vlida y por el cuociente entre el rea involucrada en la
licitacin y el rea total disponible para el proyecto, la cual segn las Bases ascenda a
11,83 hectreas. Si el proceso no culminaba con la firma del contrato, Empresa Portuaria
Valparaso pagara como nico honorario por la segunda etapa el equivalente a 500 U.F.
Indica que en su oferta econmica South Andes Capital S.A., propuso 2.100 U.F. como
precio fijo de honorarios correspondientes a la primera etapa y 28.500 U.F., como valor
neto base para los efectos del clculo del monto de los honorarios correspondientes a la
segunda etapa.
Hace presente que la empresa asesora no solicit ni recibi ningn honorario superior por
el mayor tiempo que debi dedicar a su asesora y que, en consecuencia, las obligaciones
tanto de la actora como de Empresa Portuaria Valparaso, correspondientes a la primera
etapa, se encuentran totalmente cumplidas.
Expresa que esta segunda etapa culmin con la firma del contrato de concesin y
arrendamiento entre Empresa Portuaria Valparaso y Plaza Valparaso S.A. el 10 de
noviembre de 2006 y que, con ello, se dio cumplimiento a la nica condicin estipulada,
devengndose, en consecuencia, el honorario de xito pactado para la segunda etapa.
Indica que los factores que determinan el monto del honorario de xito son, de
conformidad con lo estipulado en la clusula tercerauno del contrato, el valor "neto base
del honorario de xito proyecto Borde Costero Barn", monto que asciende a 28.500 U.F.;
el "factor de nmero de ofertas vlidas", el que en el caso en particular, habindose
presentado slo una oferta vlida a la licitacin, es igual a uno; el "rea involucrada en la
licitacin", que corresponde a las reas que se describen en el anexo II de las bases de la
495
Expresa, en primer lugar, que en las bases de licitacin claramente se indic que el objeto
final de la asesora consista en "permitir alcanzar los objetivos definidos", a la
demandada, lo cual a su juicio, debe interpretarse entendiendo que el contrato que une a
las partes es un contrato con resultado garantizado o tambin denominado de xito, de lo
cual debe concluirse que si no hay xito para Empresa Portuaria Valparaso, no hay
obligacin de pago del precio pactado en el contrato.
Expone que el proceso de licitacin no ha terminado con la firma del contrato respectivo y
que dicho trmite es slo un importante paso, pero no la culminacin del proceso de
licitacin, situacin por la cual no se ha devengado todava el honorario de xito
demandado.
496
Asevera que sta frmula es la que efectivamente se contiene en el contrato para calcular
el honorario de xito y que fue concebida bajo una primera premisa en la cual es asesor
financiero consideraba la realizacin de varios procesos de licitacin y mltiples contratos
por distintos espacios fsicos.
Agrega que el espritu de las partes al establecer la frmula de clculo del honorario de
xito consider que en el evento que se optara por varios procesos de licitacin, el
honorario fuera pagado de forma proporcional a la superficie licitada, de modo que el
cuociente de dividir el rea total por: el rea involucrada fuera menor de uno y, en el caso
que se hiciera slo un proceso de licitacin, dicho cuociente fuera igual a uno.
Por sentencia de primero de octubre de dos mil siete, escrita a fojas 340, la seora juez
titular del referido tribunal acogi con costas la demanda, slo en cuanto conden a la
demandada a pagar a la demandante a ttulo de honorarios la suma equivalente a
102.801,37 U.F., sin intereses, ni costas, por no haber sido totalmente vencida.
que la demandada se constituye en mora, una vez que la sentencia quede ejecutoriada y
la confirm, en lo dems apelado.
CONSIDERANDO:
Sostiene, asimismo, que la sentencia impugnada no se hace cargo ni decide todas las
excepciones o defensas que su representada hizo valer en el juicio, manifestando que, en
relacin a la exigibilidad del honorario por xito, no se pronuncia respecto de las defensas
opuestas por su parte relativas que la interpretacin propuesta por la demandante es
contraria a la naturaleza del contrato de asesora; no cumple con las exigencias de
cumplimiento de las condiciones suspensivas, segn previene el artculo 1483 del Cdigo
Civil; ni constituye una interpretacin de buena fe en los trminos del artculo 1546 del
mismo cuerpo legal.
Agrega, en relacin a la determinacin del monto del honorario por xito, que el mero
sentido literal de la clusula tercera del contrato de asesora demuestra que la
interpretacin correcta del segundo factor de la frmula de clculo, es que dicho elemento
constituye un tope o mximo y que la sentencia objeto de reproche no fundament su
decisin explicando por qu su interpretacin sera respetuosa del tenor literal del
contrato; ni razon en consideracin al principio de la buena fe o a lo que constituy la
498
voluntad de las partes; ignorando, asimismo, reflexionar acerca del status jurdico de las
reas opcionales;
Por otra parte, la demandante omite al citar la disposicin del artculo 1483 del Cdigo
Civil como infringida, lo dispuesto en el precepto siguiente, el cual seala: "Las
condiciones deben cumplirse literalmente, en la forma convenida" , y los sentenciadores
de primera y segunda instancia ponderando las probanzas rendidas por las partes en
autos establecieron que la condicin para el pago del "honorario de xito" se cumpli no
slo literalmente sino tambin como la entendieron las partes cuando firmaron el contrato
el ao 2003, no habindose vulnerado entonces el principio de la buena fe establecido en
el artculo 1546 del Cdigo Civil;
CUARTO: Que finalmente, cabe consignar, adems, que los hechos por los cuales se
construye el argumento relativo a esta causal, no constituyen el vicio denunciado, puesto
que ste aparece cuando la sentencia carece de decisin del asunto controvertido, pero
no concurre cuando sta decisin existe, pero no se compadece con los argumentos del
reclamante, cual es el caso de autos;
SEXTO: Que la recurrente sostiene que la sentencia de segundo grado que confirm el
fallo, del tribunal a quo, acogiendo, en definitiva, la demanda interpuesta en autos, fue
dictada con abierta infraccin a los artculos 1483, 1485, 1545, 1566, 1560, 1563 y 1566
del Cdigo Civil, segn pasa a explicar.
Aade que el honorario por xito constituye simplemente una obligacin de pago sujeta a
condicin suspensiva y que los jueces transgredieron con su reflexin sobre el particular
el artculo 1483 del aludido cuerpo legal.
Por su parte, en relacin a la determinacin del monto de los honorarios, manifiesta que
se infringieron los artculos 1485, 1545, 1546 y 1560 del Cdigo Civil, toda vez que se
consideraron para el clculo del "rea involucrada en la licitacin" una serie de superficies
no contenidas en el convenio; porque se desatendi el sentido natural y obvio de la
clusula tercera del contrato, especficamente, respecto de los conceptos "rea" y "rea
total"; al desestimar la intencin de los contratantes y el principio de la buena fe
contractual; y porque se omiti diferenciar entre el rea efectiva y originalmente
500
SPTIMO: Que si el asunto litigioso fuera netamente jurdico como lo expresa en primer
trmino la demandada, no habra existido siquiera resolucin que recibiera la causa a
prueba y puntos sobre los que ella deba recaer. La parte demandada, en su libelo de
casacin en la forma, contra la sentencia de primera instancia sostiene, a fojas 378, que
solicit agregar un importante punto de prueba a su juicio, respecto a la superficie o
rea de licitacin al cual accedi el contrato de asesora suscrito entre las partes y si
existieron modificaciones posteriores. Luego dice que como dicho punto no fue agregado
al auto de prueba, apel para que la I. Corte de Apelaciones de Valparaso resolviera si
deba ser incluido o no. Segn rola a fojas 454, se certific, por parte de la Sra. Secretaria
de dicha Corte de Apelaciones, que dicha apelacin para agregar dicho punto de prueba
ingres a la Corte y se tuvo por desistida el 26 de octubre de 2007;
OCTAVO: Que en lo referido a la trasgresin del artculo 1560 en relacin al 1483, ambos
del Cdigo Civil, no cabe sino decir que a los hechos establecidos por los sentenciadores,
tanto de primera como de segunda instancia, se les aplic estrictamente el derecho, por
cuanto estimaron que segn la redaccin de la clusula tercera del contrato y otros
hechos acreditados en autos, la condicin suspensiva se cumpli del modo que
racionalmente deba cumplirse, es decir, lograr la demandante que la demandada firmara
en definitiva el contrato de concesin con la empresa adjudicataria del proyecto Borde
Costero Barn. Por otra parte y retrotrayndose a lo expresado en la parte final del
considerando cuarto de esta misma sentencia, las condiciones deben cumplirse
literalmente en la forma convenida. Y dicha condicin, segn los jueces del fondo se
cumpli de modo absoluto, tal como lo manda el artculo 1485, puesto que no poda
hacerse depender dicha condicin de un contrato suscrito por la demandada tres aos
despus con otra empresa, cuyos trminos le eran inoponibles a la demandante, ya que
dicha forma de condicionar el honorario de xito, a la voluntad de un tercero (empresa
adjudicataria, municipalidad respectiva, incluso caso fortuito, etc.) debi preverse y/o
pactarse en el contrato original del ao 2003 o haber modificado este en dichos trminos
para as aclarar el devengamiento del honorario de xito, si es que las condiciones entre
la firma del ao 2003 y 2006 hubieran producido que la obligacin de la demandada se
volviera ms onerosa, tal como se desprende de sus escritos;
NOVENO: Que en lo relativo a la presunta trasgresin de los artculos 1563, 1546 y 1566
del Cdigo Civil, por cuanto no se habra considerado la naturaleza del convenio; se
habra desatendi el principio de la buena fe contractual; y se recurri erradamente a la
aplicacin del ltimo precepto citado, es menester decir, primeramente, en relacin al
artculo 1563, que no repugna a dicha normativa el que en el contrato se hayan pactado
honorarios cuantiossimos de la forma en que se hizo y que su clculo arroje una gran
suma para la demandada, puesto que el proyecto en s es de grandes dimensiones y
alcances a nivel de la ciudad de Valparaso y de su borde costero, por lo cual un
honorario elevado, pactado entre las partes, que se supone fueron asistidas legalmente y
por diversos profesionales en la redaccin del contrato, que justamente consideraba
cuando se devengaba dicho honorario de xito y su monto, qued entregado por completo
a la libertad contractual de las partes involucradas;
501
Finalmente se invoca el artculo 1546, que exige el cumplimiento del contrato de buena fe,
y se dice que el acreedor si acosa a su deudor para que cumpla, aunque ello le signifique
un perjuicio desconsiderado, no est de buena fe. Pero desde luego en autos, el acreedor
no ha intervenido en el imprevisto que hace ms gravoso el cumplimiento, y si realmente
lo hubiera hecho no necesitara el deudor la imprevisin para defenderse. Por ltimo, el
502
Cdigo explica tambin que: "el contrato obliga, adems de lo que se expresa, a lo que le
pertenece por su naturaleza, por la ley o por la costumbre; y en ninguna de ellas aparece
la imprevisin" (ob.cit. pg. 705706);
Finalmente, el xito del contrato es un aspecto de hecho, fallado por lo jueces del fondo y
por ende al no constituir la casacin un recurso que permita un nuevo examen de los
hechos, esta Corte Suprema no puede modificarlos, sino slo limitarse a establecer la
correcta aplicacin del derecho.
a). Estima transgredidos los artculos 1551 y 1559 del Cdigo Civil, en relacin al artculo
19 de la Ley 18.010.
503
Seala que en el caso sub lite, al tratarse de una obligacin de pagar una suma de dinero,
procede que se disponga el pago de intereses corrientes, calculados desde la fecha en
que la demandada debi haber cumplido con la obligacin o, al menos, desde la poca en
que fue judicialmente reconvenida.
b). Denuncia infraccin al artculo 144 del Cdigo del Procedimiento Civil.
Sostiene que constituye error de derecho considerar que Empresa Portuaria Valparaso
tuvo motivo plausible para litigar, toda vez que su parte debi recurrir a los tribunales de
justicia para que aquella fuera conminada a satisfacer lo que le adeuda, en circunstancias
que el propio fallo reconoce como un hecho de la causa que tanto el Directorio como el
Gerente General de la empresa demandada saban que el honorario de asesora se
devengaba contra la firma del contrato de concesin, situacin que aconteci el 10 de
noviembre del ao 2006;
504
De otro lado la demandante, en su libelo a foja 8 vuelta solicita "...ms los intereses
corrientes que correspondan, o los que S.S. determine, devengados desde la fecha en
que la demandada debi cumplir su obligacin, esto es, el 10 de noviembre de 2006, o
desde la fecha que S.S. determine, hasta la fecha en que de cabal cumplimiento a su
obligacin, todo ello con costas." (sic), lo cual quiere decir que la demandante facult
expresamente a los tribunales de primera y segunda instancia a determinar la fecha
desde la que correran los intereses, por lo cual la decisin de la I. Corte de Valparaso no
slo se encuentra dentro de la legalidad derecho objetivo, sino que dentro de la
prudencia y la equidad, derecho como equivalente a justicia, como portador del valor
justicia por lo cual no cabe ms que rechazar las argumentaciones de la demandante en
cuanto a la primera infraccin denunciada;
Este artculo dispone en su inciso primero: "La parte que sea vencida totalmente en un
juicio o en un incidente, ser condenada al pago de las costas. Podr con todo el tribunal
eximirla de ellas, cuando aparezca que ha tenido motivos plausibles para litigar, sobre lo
cual har declaracin expresa en la resolucin." De lo trascrito se deduce claramente que
la parte demandada fue eximida del pago de las costas por haber tenido que llegar las
partes a la justicia para determinarse si se deba o no el pago del honorario. El hecho de
haber tambin justificado o siquiera mencionado a la demandante no obsta ni viola lo
dispuesto en el artculo 144 del Cdigo de Procedimiento Civil. A mayor abundamiento, la
posicin total y absolutamente opuesta de las partes; la demandante solicitando un
honorario y la otra refutando que este ni siquiera se haba devengado o, que en todo caso
era bastante inferior al solicitado, ya es motivo ms que plausible para reafirmar lo fallado
por los jueces de apelacin en lo que a la exencin del pago de costas se refiere;
Por estas consideraciones y visto, adems, lo dispuesto en las normas legales citadas y
en los artculos 765, 767 y 768 del Cdigo de Procedimiento Civil, se rechazan los
recursos de casacin en la forma y en el fondo interpuestos en lo principal y segundo
otros de la presentacin de fojas 468 y en la peticin principal de fojas 463, por los
abogados don Sergio Arze Roman, en representacin de la demandada Empresa
Portuaria Valparaso y por don Juan Carlos Osorio Johannsen, por la demandante South
Andes Capital S.A., respectivamente, en contra de la sentencia de siete de abril de dos
mil ocho, escrita a fojas 458.
505
a). El prrafo final del motivo segundo, que se inicia con el vocablo "Incluso" y termina en
el sustantivo "norma".
b). El apartado del fundamento dcimo que comienza con la expresin "Esa situacin" y
termina en la enunciacin de cita "(ob. cit. pg. 705)".
Para resolver el rechazo del segundo captulo del recurso de casacin de la actora, tiene
en consideracin que la regulacin de las costas no constituye materialmente una
decisin que ponga trmino al proceso, sino que es accesoria a ste, por lo que su
determinacin no puede ser objeto de impugnacin por la va del arbitrio procesal
intentado.
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema por los Ministros Sres. Milton Juica
A., Sergio Muoz G., Juan Araya E. y Guillermo Silva G. y Abogado Integrante Sr. Benito
Mauriz A.
No firman los Ministros Sres. Juica y Silva, no obstante haber concurrido ambos a la vista
del recurso y acuerdo del fallo, por estar con feriado legal el primero y en comisin de
servicios el segundo.
Rol N 2.65108.
506
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Solidaridad
C. Santiago
1 y 2.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
1) Que la parte ejecutante, en su escrito de apelacin en contra de la sentencia, sostiene
que en virtud del artculo 2519 del Cdigo Civil, la calidad de codeudora solidaria que
tiene la ejecutada, respecto del suscriptor del pagar, no permite la concurrencia de la
excepcin de prescripcin opuesta ya que hubo interrupcin de la misma al haberse
notificado al deudor principal dentro del plazo de un ao contado desde el vencimiento del
documento y esta interrupcin tambin afect a la demandada pues la obligacin la
contrajo en forma solidaria;
2) Que en los autos tenidos a la vista, se constata que la demanda ejecutiva se dirigi
nicamente en contra del deudor principal sin haber perseguido la responsabilidad del
aval ni tampoco formular reserva alguna de sus derechos respecto de sta. Esta opcin
de perseguir el total de su pago en el patrimonio del suscriptor constituye una renuncia
tcita a la solidaridad propia del aval, en los trminos previstos en el artculo 1516 del
507
REGLA .
a.- Cuando existen dos o ms obligados solidariamente, el dirigir una accin de
cumplimiento sobre cualquiera de ellos sin hacer reserva especial de la solidaridad o
reserva general de sus derechos, implica la renuncia tcita del acreedor a esta ltima.
b.- La extincin de la solidaridad por renuncia tcita del acreedor, impide que opere la
interrupcin de la prescripcin en perjuicio de los codeudores, de acuerdo al artculo 2519
en relacin al artculo 1516 del Cdigo Civil.
4. CITA DE FUENTE.
C. Santiago, 16 septiembre 2009. G.J. N 351, p.128. L.P. 42647126
Corte Santiago
Fallo:
126
La parte vencida dedujo recurso de casacin en el fondo pero no consign lo ordenado en el inciso
segundo del artculo 197 del Cdigo de Procedimiento Civil dentro de plazo, tenindosele por desistido del
recurso.
508
2) Que en los autos tenidos a la vista, se constata que la demanda ejecutiva se dirigi
nicamente en contra del deudor principal sin haber perseguido la responsabilidad del
aval ni tampoco formular reserva alguna de sus derechos respecto de sta. Esta opcin
de perseguir el total de su pago en el patrimonio del suscriptor constituye una renuncia
tcita a la solidaridad propia del aval, en los trminos previstos en el artculo 1516 del
Cdigo Civil, por lo que la interrupcin de la prescripcin respecto de la codeudora
solidaria no la afect, siguiendo su curso la prescripcin en virtud de lo sealado en el
artculo 2519 en relacin con el ya indicado artculo 1516, ambos del estatuto civil;
Regstrese y devulvase.
509
Pronunciada por la Octava Sala de esta Corte de Apelaciones presidida por el Ministro
seor Juan Manuel Muoz Pardo, e integrada por la Ministra seora Amanda Valdovinos
Jeldes y por el Abogado Integrante seor Jorge Lagos Gatica.
Rol N 8202009.
510
Tema Clave
Tribunal
Considerando
12.
Accin Resolutoria
12.
C. Santiago
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
DUODECIMO: Que, como es ampliamente sabido, el artculo 1552 del Cdigo Civil
establece lo que la doctrina ha denominado "excepcin de contrato no cumplido", figura
jurdica de amplia aplicacin en los contratos bilaterales pues representa una
prolongacin del principio de buena fe consagrado en el artculo 1546 del referido cdigo.
No es jurdicamente correcto que un contratante demande a su contraparte exigindole el
cumplimiento de diversas prestaciones, si el mismo, no ha cumplido las suyas.
511
Este principio se encuentra ntidamente manifestado en el artculo 1489 del Cdigo Civil,
norma que consagra la conocida condicin resolutoria tcita, y para la procedencia de la
misma se exige que quien entabla la demanda haya cumplido o se encuentre llano a
cumplir sus propias obligaciones. Esta Corte no desconoce la discusin doctrinaria acerca
de la aplicabilidad de la condicin resolutoria tcita a los contratos de tracto sucesivo,
como lo es el de arrendamiento, sin embargo y sin entrar a pronunciarse sobre el
particular, estima que el principio que subyace en el artculo 1489 del Cdigo Civil es el
mismo que consagra el artculo 1552 y cuya base - tal como se dijo - brota del principio de
buena fe consagrado por el artculo 1546.
3.
REGLA .
a.- El artculo 1552 del Cdigo Civil establece lo que la doctrina ha denominado
"excepcin de contrato no cumplido", figura jurdica de amplia aplicacin en los contratos
bilaterales pues representa una prolongacin del principio de buena fe consagrado en el
artculo 1546 del referido cdigo. No es jurdicamente correcto que un contratante
demande a su contraparte exigindole el cumplimiento de diversas prestaciones, si el
mismo, no ha cumplido las suyas.
4. Cita de Fuente.
C. Santiago, 21 septiembre 2009. M.J. N 21690127
127
Se dedujo recurso de casacin en la forma y fondo en su contra, ambos fueron rechazados por la Corte Suprema en
fallo de fecha 16 de diciembre de 2011, Rol 9176-2009.
512
Corte Santiago
Fallo:
VISTOS:
Sin embargo, para una mayor claridad de esta sentencia, en primer lugar se har el
estudio de la casacin formal para una vez, concluida sta, analizar el recurso de
apelacin.
PRIMERO: Que, a fojas 727, don Eduardo Estay Rodrguez y don Germn Subercaseaux
Sousa, en representacin del demandado de autos, interpusieron recurso de casacin en
la forma en contra de la sentencia definitiva ya singularizada y solicitaron la nulidad del
referido fallo por haber incurrido ste, a su juicio, en los vicios de casacin previstos por
los numerales 5, 7 y 9 del artculo 768 del Cdigo de Procedimiento Civil, en relacin el primero - con el artculo 170 N4 del mismo texto legal.
SEGUNDO: Que, del simple anlisis del recurso sealado, se observa que ste debe
necesariamente declararse inadmisible en lo que dice relacin con las causales 5 y 9 del
artculo 768 del Cdigo de Procedimiento Civil, pues esa norma, precisamente, deniega la
posibilidad de invocar tales causales en los juicios a que se refiere el artculo 766 del
Cdigo de Procedimiento Civil, es decir, aquellos regidos por leyes especiales, cuyo es el
caso de autos, por ser lo debatido un juicio de arrendamiento regido por la ley 18.101.
513
TERCERO: Que, en lo que dice relacin con la causal 7 del artculo 768 del Cdigo antes
citado, cabe sealar que del estudio comparativo de los recursos de apelacin y casacin
en la forma interpuestos, se observa y concluye, que ambos se construyen sobre
idnticos fundamentos, antecedente que lleva a esta Corte a desestimar tambin el
recurso de casacin deducido, por cuanto aparece de manifiesto que el recurrente no ha
sufrido un perjuicio reparable slo con la invalidacin del fallo, tal como lo establece el
inciso penltimo del artculo 768 del Cdigo de Procedimiento Civil.
VISTOS:
QUINTO: Que, derivado de lo anterior, los artculos 1924 y 1938 del Cdigo Civil,
consagran las obligaciones que asumen los contratantes en un contrato de arrendamiento
de cosas.
514
arrendamiento.
De conformidad con el documento que rola a fojas 469 de autos, en particular, con su
clusula SEGUNDA o artculo 2, la arrendadora y hoy da demandante daba en
arrendamiento a la arrendataria, hoy da demandada, el Local 4000 del centro comercial
situado en Avenida La Florida N6.100 para que lo destinara exclusivamente a la
comercializacin de CENTRO MEDICO, CLINICA Y SERVICIOS ANEXOS O
COMPLEMENTARIOS DE SALUD.
SEPTIMO: Que, en consecuencia, salta a la vista que el contrato de autos no daba cuenta
de un simple arrendamiento de un local comercial destinado a vender productos de
variada ndole, como son los que pblicamente se conocen en los denominados MALL,
sino que se trataba de instalar una CLINICA, es decir, un establecimiento de salud.
OCTAVO: Que, como es sabido, ahora y antes, las actividades propias de la medicina, y
entre ellas el funcionamiento de establecimientos asistenciales, se encuentra
rigurosamente regulada por la autoridad, a saber, artculos 4, 7, y 12 N 3 del Decreto
con Fuerza de Ley N 1 de 2005, Decreto N 161 de 1982 sobre Reglamento de
Hospitales y Clnicas; Decreto Supremo N 283 de 1997, sobre Reglamento de Salas de
Procedimientos y Pabellones de Ciruga Menor, etc.
NOVENO: Que, de esta manera fcil resulta concluir que el contrato de arrendamiento de
autos era un negocio complejo que necesariamente debera contar con los pertinentes
permisos de la autoridad de salud. Solicitudes que de acuerdo al mrito de autos nunca
alcanzaron a presentarse ante los rganos pertinentes.
DECIMO: Que, en esos trminos, surgen mltiple preguntas, que se pueden resumir en
una sola: las autoridades de salud podran dar la autorizacin requerida para que el
negocio pudiera realizarse? Si la respuesta es negativa, el contrato suscrito entre las
partes y que es materia de autos, contendra un imposible pues nunca habra podido
operar la clnica, pudiendo estimarse incluso que el referido acto jurdico adolecera de
objeto ilcito.
515
UNDECIMO: Que, con todo lo anteriormente dicho, relacionando las normas del Cdigo
Civil que regulan el contrato de arrendamiento con lo sucedido en el caso de autos, esta
Corte concluye que las partes al celebrar el acto jurdico que las vincula, ya sea por actuar
con premura, ya sea por actuar como si se tratara del arrendamiento de un local tpico de
un centro comercial, nunca pudieron habilitar el espacio en que funcionara la clnica y por
consiguiente el contrato qued inconcluso pues las partes no pudieron dar cumplimiento a
sus respectivas obligaciones.
DUODECIMO: Que, como es ampliamente sabido, el artculo 1552 del Cdigo Civil
establece lo que la doctrina ha denominado "excepcin de contrato no cumplido", figura
jurdica de amplia aplicacin en los contratos bilaterales pues representa una
prolongacin del principio de buena fe consagrado en el artculo 1546 del referido cdigo.
No es jurdicamente correcto que un contratante demande a su contraparte exigindole el
cumplimiento de diversas prestaciones, si el mismo, no ha cumplido las suyas.
Este principio se encuentra ntidamente manifestado en el artculo 1489 del Cdigo Civil,
norma que consagra la conocida condicin resolutoria tcita, y para la procedencia de la
misma se exige que quien entabla la demanda haya cumplido o se encuentre llano a
cumplir sus propias obligaciones. Esta Corte no desconoce la discusin doctrinaria acerca
de la aplicabilidad de la condicin resolutoria tcita a los contratos de tracto sucesivo,
como lo es el de arrendamiento, sin embargo y sin entrar a pronunciarse sobre el
particular, estima que el principio que subyace en el artculo 1489 del Cdigo Civil es el
mismo que consagra el artculo 1552 y cuya base - tal como se dijo - brota del principio de
buena fe consagrado por el artculo 1546.
Procedimiento Civil, se revoca la sentencia definitiva dictada en estos autos con fecha
treinta y uno de enero de dos mil seis, la cual rola a fojas 727 y siguientes de autos, en
aquella parte que acoge la demanda de fojas 45, y se declara:
a) que se rechaza la demanda de fojas 45 interpuesta por Cencosud Shoopin Center S.A.
ex Inmobiliara Las Verbenas S.A. en contra de Proyectos y Desarrollos Mdicos S.A.
El mismo ministro est por revocar el fallo en alzada, tambin, en la parte que rechaza la
demanda reconvencional deducida por PROYECTOS Y DESARROLLOS MDICOS S.A.,
la que est por acoger. Para ello prescinde de los razonamientos 56 y 57 de la
sentencia impugnada y tiene presente que:
As lo deja establecido la letra a) del razonamiento vigsimo tercero del fallo de primera
instancia.
3) De la debida conjuncin entre lo uno y lo otro se infiere, por simple aplicacin de las
reglas de la lgica formal, que quien daba en arrendamiento deba entregar una
construccin apta para el normal desarrollo del sealado giro.
4) Para ello la clusula tercera del contrato de arrendamiento oblig a la arrendadora aqu
demandante a entregar el inmueble en las condiciones que expresan sus anexos B y C, el
primero de los cuales precisa en su captulo vigsimo sexto que aqulla se compromete a
construir el local de modo que estructuralmente cumpla y est conforme con las
exigencias prescritas por toda la normativa relativa a la salud pblica, la sanidad y la
seguridad; como se trataba de una obra en desarrollo, en ese mismo captulo la
arrendadora se oblig a ejecutar las modificaciones que para lo anterior fueren
necesarias.
Por expresa convencin -clusula adicional dcimo quinta- las partes sostuvieron que
dicho anexo B se interpretara teniendo en cuenta que lo arrendado se destinara a la
prestacin de servicios de clnica y centro mdico.
Dos de los tres testigos de la reconvencionada contribuyen a ese aserto. Javier Soler
Viada, al admitir que a la constructora no se le hizo saber que deba acondicionarse la
edificacin para que operara una clnica; y Edgardo Flores Parra al confesar que no
distingue entre centro mdico y clnica...
La inspeccin personal del tribunal, por lo dems reiterada, es por s sola decidora en la
materia. Era fcil comprobar in situ la satisfaccin de elementales caractersticas
518
8) Obvio resulta para este juez el deterioro patrimonial que del incumplimiento por parte
de la duea y arrendadora ha debido seguirse para la frustrada arrendataria.
Lo dems est dicho por los artculos 1.489, 1.925, 1.932 y 1.933 del Cdigo Civil.
519
Ingreso N 3684-2006.-
Dictada por los Ministros seor Carlos Cerda Fernndez, seor Patricio Villarroel Valdivia
y por el Abogado Integrante seor Angel Cruchaga Gandarillas.
N de Identificacin Interna: (37)
Corte Suprema Rol N 5471-08
Fecha 28 Septiembre 2009
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Clusula de aceleracin
C. Suprema
6. y 7.
caducidad convencional del plazo - de lo cual resulta que a "prima facie" debiera
considerarse que el acreedor puede accionar y hacer exigible el total de la obligacin al
deudor desde la fecha del incumplimiento, comenzando a correr desde all el plazo de
prescripcin extintiva, lo cierto es que no puede desconocerse que las partes acordaron
expresamente que las condiciones de la aceleracin puede retardarse hasta la ltima
cuota, sealando, adems, que lo hacen a favor del acreedor. Lo anterior se desprende
indefectiblemente del prrafo segundo de la clusula segunda escrito del modo que sigue:
"Por tratarse de la presente clusula, de una estipulacin de caducidad del plazo
establecida enteramente a favor de la Cooperativa, el suscriptor de este pa gar entiende
y expresa que la mencionada clusula no importa al acreedor la carga de accionar
ejecutivamente a la fecha del primer vencimiento insoluto, sino que podr esperar el
vencimiento de la ltima cuota para demandar el total de lo adeudado, contndose desde
esta ltima el tiempo exigido por la ley para que opere una eventual prescripcin. En
ningn caso el suscriptor de este pagar entiende dicha espera como pasividad del
acreedor beneficiario."
SEPTIMO: Que consignado lo anterior ha de tenerse presente que el artculo 1545 del
Cdigo Civil sienta el principio por el cual se le da realce a la autonoma de la voluntad en
cuya virtud opera "La libertad de que gozan los particulares para pactar los contratos que
les plazcan, y de determinar su contenido, efectos y duracin", como lo admite el Profesor
Arturo Alessandri en su clsica obra sobre "Los Contratos". El autor Jorge Lpez Santa
Mara sobre esta materia comenta que: "El principio de la autonoma de la voluntad es
una doctrina de filosofa jurdica segn la cual toda obligacin reposa esencialmente sobre
la voluntad de las partes. Esta es, a la vez, la fuente y la medida de los derechos y de las
obligaciones que el contrato produce", como lo admite en su texto "Sobre Los Contratos,
Parte General". Siendo esto as, quiere decir que la autonoma de la voluntad se funda en
los principios propios de la ilustracin de la libertad y de la igualdad, que llevados ambos
al plano jurdico, se traducen en igualdad y libertad jurdica de las partes. Esta libertad
jurdica se divide, a su vez, en la libertad para contratar, que es la libertad para celebrar o
no el contrato y con quien, y la libertad contractual, que es la libertad para fijar los
trminos o contenidos del contrato.
521
22. REGLA .
a.- No obstante los claros trminos imperativos de la clusula de aceleracin, de lo cual
resulta que a "prima facie" debiera considerarse que el acreedor puede accionar y hacer
exigible el total de la obligacin al deudor desde la fecha del incumplimiento, comenzando
a correr desde all el plazo de prescripcin extintiva, lo cierto es que no puede
desconocerse que las partes acordaron expresamente que las condiciones de la
aceleracin puede retardarse hasta la ltima cuota, sealando, adems, que lo hacen a
favor del acreedor. Lo anterior se desprende indefectiblemente del prrafo segundo de la
clusula segunda escrito del modo que sigue: "Por tratarse de la presente clusula, de
una estipulacin de caducidad del plazo establecida enteramente a favor de la
Cooperativa, el suscriptor de este pagar entiende y expresa que la mencionada clusula
no importa al acreedor la carga de accionar ejecutivamente a la fecha del primer
vencimiento insoluto, sino que podr esperar el vencimiento de la ltima cuota para
demandar el total de lo adeudado, contndose desde esta ltima el tiempo exigido por la
ley para que opere una eventual prescripcin. En ningn caso el suscriptor de este pagar
entiende dicha espera como pasividad del acreedor beneficiario.
Dicha clusula de aceleracin es vlida y perfectamente aplicable al negocio de que se
trata, razn por la cual no puede desatenderse su contenido. De manera que, habindose
extendido la exigibilidad del total del saldo insoluto del crdito a partir de la ltima cuota
pactada, resulta que, es desde esta data que corresponde computar el plazo de
prescripcin
522
Corte Suprema
Fallo:
VISTOS:
En estos autos rol Nro. 1884-2004, seguidos ante el Tercer Juzgado Letras de Talca
sobre juicio ejecutivo, caratulado "Cooperativa de Ahorro y Crdito Oriente Limitada con
San Martn, Mara Ins", por sentencia escrita a fojas 117, de veintisiete de octubre de dos
mil cinco, se acogi la excepcin de prescripcin de la accin ejecutiva deducida por la
parte ejecutada y, consecuencialmente, se absolvi a la misma de la presente ejecucin.
A su vez se rechazaron las excepciones previstas en el artculo 464 nmeros 7 y 9 del
Cdigo de Procedimiento Civil.
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Y TENIENDO EN CONSIDERACIN:
PRIMERO: Que la recurrente sostiene que la sentencia de segundo grado ha sido dictada
con infraccin a los artculos 98 , 105 inciso segundo de la Ley 18.092; 13 , 1494 , 1496 ,
1560, 2492 y 2514 del Cdigo Civil. Expone que ha existido error de derecho al analizar
la clusula de aceleracin por cuanto el pagar objeto de esta ejecucin contiene la
obligacin de efectuar pagos sucesivos en 24 cuotas iguales, lo que significa que tiene 24
vencimientos y, de acuerdo al inciso segundo del artculo 105 de la Ley 18.092, la
clusula de aceleracin es expresa, constituyendo una excepcin a la regla general del
inciso tercero que dispone que si no se establece, cada cuota debe protestarse por
separado. Aade que el pagar expresa que el no pago oportuno de una cuota o parte de
cualquiera, hace exigible el total de la deuda, como de plazo vencido. Ello importa que
opere incluso en el caso del pago parcial de una cuota.
Asevera que la clusula de aceleracin est estatuida a favor del acreedor, esa fue la
intencin del legislador y, de no existir esta clusula se deba protestar cada cuota
insoluta por separado. Aade que el plazo es una condicin fijada a favor del deudor y
debe cumplirse con lo que seala el artculo 1494 del Cdigo Civil. Agrega que la
excepcin a la regla del cumplimiento del pago es la caducidad del mismo, contemplado
en el artculo 1496 del mismo cuerpo legal, la que prev dos situaciones, la primera es la
quiebra o insolvencia notoria del deudor y la segunda, es la destruccin de las cauciones
por hecho o culpa del deudor.
Contina indicando que el inciso segundo del artculo 105 de la Ley 18.092, es un caso de
caducidad del plazo que slo exige el no pago de una de las cuotas y, esta norma, por ser
de excepcin hay que interpretarla en forma restrictiva por aplicacin del artculo 13 del
Cdigo Civil. Afirma que esta clusula da derecho al acreedor a cobrar de inmediato el
saldo adeudado, todas las cuotas pendientes, como de plazo vencido, pero, en ninguna
parte de la ley se seala que queda al arbitrio del acreedor la fecha en que va a interponer
la accin.
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Manifiesta que la norma del artculo 1560 del Cdigo Civil, referente a la intencin de los
contratantes es aplicable pero con las limitaciones legales, consecuencialmente, las
partes son soberanas para acordar la clusula de aceleracin pero si sta se incluye,
debe usarse conforme a derecho. Sostiene que contemplada la clusula de aceleracin el
acreedor no puede discrecionalmente elegir cuando acciona.
SEGUNDO: Que para una acertada resolucin del recurso de nulidad sustancial
formulado, resulta conveniente dejar constancia de los siguientes antecedentes del
proceso:
1.- La Cooperativa de Ahorro y Crdito Oriente Limitada (Oriencoop Ltda.) dedujo accin
ejecutiva en contra de Mara Ins San Martn, fundada en que es duea del pagar a la
orden N 06-001-0254639-9 suscrito con fecha 24 mayo 2002 y del cual consta que la
demandada se constituy en deudora de la demandante por la suma de $551.166, ms
intereses pactados. Esta cantidad sera pagada en 24 cuotas iguales, mensuales y
sucesivas de $31.491, en las cuales se encuentran comprendidos los intereses del 2,40%
y con vencimiento cada una de dichas cuotas los das 30 de cada mes a contar del mes
de julio de 2002. Dice que el ttulo se encuentra impago desde la cuota 12 inclusive,
correspondiente al 30 junio 2003, razn por la cual la deuda total por cuotas impagas
asciende a la cantidad de $409.383 ms los intereses moratorios pactados. Conforme con
las clusulas del pagar, toda la deuda se considera exigible de plazo vencido por el
simple atraso o no pago oportuno del total o parte de cualesquiera de las cuotas referidas,
sin perjuicio del inters penal pactado y, acorde con lo estipulado en la clusula segunda,
por tratarse de una caducidad del plazo dispuesta enteramente a favor de la cooperativa,
sta podr esperar el vencimiento de la ltima cuota para demandar el total de lo
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adeudado, contndose desde esta ltima el trmino exigido por la ley para que opere un
eventual prescripcin. Es el caso, en relacin con lo que se anota, que la ltima cuota
vence el 30 junio 2004. Concluye que la cooperativa queda liberada de la obligacin de
protestar el documento; la firma del suscriptor que autorizada por un notario pblico; la
deuda es lquida, actualmente exigible y la accin ejecutiva no se encuentra prescrita.
3.- Se tuvo por evacuado el traslado conferido, en rebelda de la ejecutante. 4.- El fallo de
primer grado, en cuanto importa al recurso en estudio, acogi la excepcin de
prescripcin sealada y, consecuencialmente, absolvi a la ejecutada de la presente
ejecucin.
5.- Conociendo la Corte de Apelaciones de Talca del recurso de apelacin intentado por la
actora, revoc la sentencia de primera instancia en aquella parte que acogi la excepcin
prevista en el Nro. 17 del artculo 464 del Cdigo de Procedimiento Civil y en su lugar la
rechaz.
TERCERO: Que se tienen como hechos de la causa que resultan inamovibles, por no
haberse denunciado infraccin a normas reguladoras de la prueba que justifiquen su
revisin, los siguientes:
de julio de 2002.
b).- En la clusula segunda del pagar se convino que "La deuda se considerar exigible
y de plazo vencido, por el simple atraso o no pago oportuno del total o parte de
cualesquiera de las cuotas referidas, sin perjuicio del inters penal pactado. Todas las
obligaciones emanadas de este pagar sern solidarias para el suscriptor, codeudores,
fiadores y dems obligados al pago, y sern indivisibles para sus herederos o sucesores,
para todos los efectos legales, y en especial para aquellos contemplados en los artculos
1526 N 4 y 1528 del Cdigo Civil, pudiendo exigirse su cumplimiento total a cada uno de
los herederos del deudor o a cada uno de los sucesores legales a cualquier ttulo del
suscriptor. Por tratarse la presente clusula, de una estipulacin de caducidad del plazo
establecida enteramente a favor de la Cooperativa, el suscriptor de este pagar entiende
y expresa que la mencionada clusula no importa al acreedor la carga de accionar
ejecutivamente a la fecha del primer vencimiento insoluto, sino que podr esperar el
vencimiento de la ltima cuota para demandar el total de lo adeudado, contndose desde
esta ltima el tiempo exigido por la ley para que opere una eventual prescripcin. En
ningn caso el suscriptor de este pagar entiende dicha espera como pasividad del
acreedor beneficiario".
c).- La ejecutada no pag la cuota Nro. 12 del crdito, correspondiente al 30 junio 2003, ni
las siguientes.
CUARTO: Que la sentencia recurrida, para revocar el fallo de primer grado y rechazar la
excepcin de prescripcin de la deuda alegada por doa Mara Ins San Martn concluye,
luego de reproducir la clusula segunda del pagar, que: "de la lectura de la clusula
transcrita, se aprecia que se estableci en el pagar, la denominada clusula de
aceleracin, en virtud de la cual se hace exigible o de plazo vencido la deuda, ante el
simple atraso o no pago oportuno del total o parte de cualesquiera de las cuotas en que
se dividi la deuda. Sin embargo en el prrafo segundo de la misma clusula se estipul
expresamente, consintiendo el deudor en ello, que dicho plazo de caducidad est
establecido a favor de la Cooperativa, aceptando el suscriptor del pagar que la
mencionada clusula no importa al acreedor la carga de accionar ejecutivamente a la
fecha del primer vencimiento insoluto, sino que puede esperar el vencimiento de la ltima
cuota. De tal modo que, existi un acuerdo de voluntades entre las partes, facultando al
acreedor demandar ante el no pago de alguna cuota o esperar el trmino del plazo, cosa
esta ltima que fue la realizada por la Cooperativa acreedora." (Considerando tercero).
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Continan los sentenciadores: "Que todo contrato legalmente celebrado es una ley para
los contratantes, en consecuencia, y habiendo expresamente el deudor consentido en que
el acreedor pueda esperar el vencimiento de la ltima cuota para accionar ejecutivamente,
debe necesariamente convenirse, en que la denominada clusula de aceleracin no tiene
el carcter de imperativa, sino que es facultativo del acreedor hacer uso o no de dicha
clusula o esperar el vencimiento de la ltima cuota. Habiendo actuado el ejecutante en
los precisos trminos previstos en el Pagar de marras, debe la excepcin de prescripcin
rechazarse." (Motivo cuarto).
QUINTO: Que para determinar si se configuran las infracciones de ley que denuncia la
recurrente, se analizar primeramente el tenor de la clusula de aceleracin incluida en el
pagar objeto de este pleito, cuyo contenido no ha sido discutido y su redaccin
corresponde a aquella expresada en el fundamento tercero que antecede.
SEPTIMO: Que consignado lo anterior ha de tenerse presente que el artculo 1545 del
Cdigo Civil sienta el principio por el cual se le da realce a la autonoma de la voluntad en
cuya virtud opera "La libertad de que gozan los particulares para pactar los contratos que
les plazcan, y de determinar su contenido, efectos y duracin", como lo admite el Profesor
Arturo Alessandri en su clsica obra sobre "Los Contratos". El autor Jorge Lpez Santa
Mara sobre esta materia comenta que: "El principio de la autonoma de la voluntad es
una doctrina de filosofa jurdica segn la cual toda obligacin reposa esencialmente sobre
la voluntad de las partes. Esta es, a la vez, la fuente y la medida de los derechos y de las
obligaciones que el contrato produce", como lo admite en su texto "Sobre Los Contratos,
Parte General". Siendo esto as, quiere decir que la autonoma de la voluntad se funda en
los principios propios de la ilustracin de la libertad y de la igualdad, que llevados ambos
al plano jurdico, se traducen en igualdad y libertad jurdica de las partes. Esta libertad
jurdica se divide, a su vez, en la libertad para contratar, que es la libertad para celebrar o
no el contrato y con quien, y la libertad contractual, que es la libertad para fijar los
trminos o contenidos del contrato.
Regstrese y devulvase.
N 5471-08.
530
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sr. Sergio Muoz
G., Sra. Margarita Herreros M. y Sr. Guillermo Silva G. y Abogados Integrantes Sres.
Jorge Medina C. y Sra. Maricruz Gmez de la Torre V.
531
Tema Clave
Interpretacin
Contrato.
Tribunal
del C. Suprema
Considerando
9.,10. y11.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
532
NOVENO: Que en este orden de ideas, es preciso tener en cuenta que la interpretacin
de los contratos queda dentro de las facultades propias de los magistrados de la
instancia, los que pueden ser revisados por esta Corte de Casacin en el evento que por
tal labor se desnaturalice el acuerdo al que ellas han llegado, transgredindose con lo
anterior la ley del contrato prevista en el artculo 1545 del Cdigo Civil, adems, de las
disposiciones pertinentes a la interpretacin de los contratos. Ello ocurre, ciertamente,
cuando se alteran las consecuencias de sus clusulas, desnaturalizndolas y, en tales
circunstancias, "el poder soberano de los jueces del pleito para establecer los hechos de
la causa, no puede extenderse a su apreciacin jurdica y a la determinacin de la ley que
les sea aplicable; y por consiguiente la ilegal apreciacin de las clusulas del contrato y
las errneas consecuencias que de esta ilegal apreciacin deduzcan los jueces del pleito
deben ser sometidas a la censura de la Corte Suprema por medio del recurso de casacin
por violacin del artculo 1545, o sea por violacin de la ley del contrato.". (Luis Claro
Solar, "Derecho Civil Chileno y Comparado", pg. 474);
DECIMO: Que la labor interpretativa de los actos y contratos tiene por objeto conocer la
intencin comn de los contratantes, la voluntad que han expresado al celebrarlo, aquello
en lo que han consentido, lo cual les uni y determin que contrataran, aspecto que,
conforme al artculo 1560 del Cdigo Civil, debe conocerse "claramente" para estarse a
ella ms que al texto del acuerdo.
En segundo lugar corresponde realizar la labor interpretativa del convenio, para lo cual se
considerar especialmente la utilidad de las clusulas del contrato, debiendo preferirse el
sentido en que pueden producir algn efecto, como tambin tener presente el riesgo de
redaccin del texto de la convencin. En esta labor, se ha dicho, que el sistema subjetivo
533
La doctrina ha tenido la oportunidad de estudiar este punto precisando que "la existencia
de una convencin (cuestin de prueba) y el alcance de una convencin (cuestin de
interpretacin) son dos aspectos diferentes, que no deben confundirse". (Jorge Lpez
Santa Mara, "Sistemas De Interpretacin De Los Contratos", Ediciones Universitarias de
Valparaso, 1971, pgina 66).
As, la interpretacin resulta necesaria cuando los trminos de una convencin suscitan
controversia entre las partes respecto de los distintos efectos que han de tener sus
estipulaciones. En esta labor se han clasificado las reglas legales entre aquellas referidas
al contrato propiamente tal y las que reflejan un comportamiento o acceden al contrato
mismo.
De esta forma se puede sealar, siguiendo al profesor Lpez Santa Mara, que existen
reglas de interpretacin intrnsecas al contrato, que en nuestro pas estn constituidas
por: a).- Armona de las clusulas (artculo 1564 del Cdigo Civil); b).- Utilidad de las
clusulas (artculo 1562); y c).- Trminos ambiguos (artculo 1563 inciso primero).
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Enunciado lo que es el principio del respeto al proceder individual y que obrar contra acto
propio no vale, la interpretacin autntica se presenta como una de las de mayor
importancia. Subrayando su capital importancia los autores chilenos, Claro Solar, por
ejemplo, estiman que en un eventual orden de prelacin, ella debera figurar
inmediatamente a continuacin del artculo 1560. "La interpretacin autntica es la reina
de todas las interpretaciones y no hay que creer a aquellos tratadistas que rechazan esa
especie de interpretacin en materia contractual. Tal error nace de la mala aplicacin de
un principio muy verdadero, el cual dice que despus de concluido el contrato, ninguna de
las partes tiene libertad para modificar a su capricho la voluntad ya declarada e
interpretarlo a su guisa. Pero este principio no es, ciertamente, acatado, si las dos partes
se ponen de acuerdo para interpretar su voluntad" En la hermenutica de los contratos, la
inteligencia, el sentido que le dan los contratantes es el faro ms seguro para conocer la
voluntad". Interpretando autnticamente, la Corte Suprema ha dicho: "La regla del inciso 3
del artculo 1564 es de importancia principalmente en la interpretacin de los contratos
que contienen obligaciones de dar o hacer, ya que nada puede indicar con ms acierto la
voluntad de las partes en esta materia que la ejecucin llevada a cabo por ellos mismos
de las cosas que, con arreglo a lo pactado, estaban obligadas a dar o hacer". (Jorge
Lpez Santa Mara, op. cit. pgina 96);
REGLA .
a.- La interpretacin de los contratos queda dentro de las facultades propias de los
535
magistrados de la instancia, los que pueden ser revisados por esta Corte de Casacin en
el evento que por tal labor se desnaturalice el acuerdo al que ellas han llegado,
transgredindose con lo anterior la ley del contrato prevista en el artculo 1545 del Cdigo
Civil, adems, de las disposiciones pertinentes a la interpretacin de los contratos.
b.- Los artculos 1560 a 1566, no tienen un orden de prelacin, derivando su mayor o
menor importancia de la incidencia que tienen en determinar la intencin de las partes
considerando las circunstancias que rodearon la celebracin del contrato y no nicamente
su texto, en todo el iter contractual, incluso lo relativo a la etapa del cumplimiento.
c.- La existencia de una convencin (cuestin de prueba) y el alcance de una convencin
(cuestin de interpretacin) son aspectos diferentes. Lo primero que debe hacerse es
determinar lo pactado, su texto, para luego realizar la labor interpretativa del convenio
propiamente tal. As, la interpretacin resulta necesaria cuando los trminos de una
convencin suscitan controversia entre las partes respecto de los distintos efectos que
han de tener sus estipulaciones. La existencia de reglas de interpretacin deben aplicarse
a esta ltima labor, en donde pese a la inexistencia de un orden de prelacin, el principio
del respeto al proceder individual y que obrar contra acto propio no vale, ponen a la
interpretacin autntica como una de las de mayor importancia.
4. CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 29 Septiembre 2009. M.J. N 21650
Corte Suprema
Fallo:
VISTO:
536
la que deben adicionarse US$ 1.300 por gastos de viaje que han debido solventar, al
tener su residencia en Estados Unidos, ms $30.000.000, que reclaman por concepto de
dao moral.
Aade que, en este contexto, el 16 de marzo del 2001, haciendo uso de su facultad
contractual y legal, contemplada en la clusula tercera del contrato, su parte decidi
ponerle trmino anticipado, enviando al efecto carta certificada al domicilio de la
arrendadora, para surtir efectos a contar del da 30 de abril de 2001.
cumplimiento de las obligaciones que ste les impona, que la arrendataria haca entrega
a los arrendadores de la suma de US$ 3.200, la que en el evento de mediar un fiel e
ntegro cumplimiento por parte de la arrendataria, debera ser devuelta dentro de los
noventa das siguientes a la fecha de restitucin del inmueble, pero que en el caso sub
lite, imputndosele en el presente juicio a la demandante reconvencional un grave
incumplimiento a sus obligaciones contractuales, se encuentran facultados para retener
dicha suma con cargo a los perjuicios morales ocasionados y para resarcirse del pago de
las rentas pendientes.
Por sentencia de trece de septiembre de dos mil dos, escrita a fojas 465, la seora juez
titular del tribunal a quo rechaz en todas sus partes la demanda principal, sin costas, por
haber tenido los actores motivos plausibles para litigar e hizo lugar a la demanda
reconvencional, condenando, en consecuencia a los demandados reconvencionales a
pagar a Inversiones Anglian Water Chile Limitada la suma de US$ 3.200, en su
equivalente en pesos al da de su pago efectivo, sin costas, por haber tenido los vencidos
motivo plausible para litigar. Recurrido de casacin en la forma y apelado el fallo por los
demandantes y habindose adherido a la apelacin la demandada, una de las Salas de la
Corte de Apelaciones de Santiago, por sentencia de catorce de enero de dos mil ocho,
que se lee a fojas 538, rechaz la casacin en la forma y en cuanto a los dems recursos,
lo confirm.
CONSIDERANDO:
539
a).- La contemplada en el N 4 del artculo 768 del Cdigo de Procedimiento Civil, esto es,
haber sido dada ultra petita, otorgando ms de lo pedido por las partes o extendindola a
puntos no sometidos a la decisin del tribunal.
Argumenta al efecto que la sentencia recurrida hizo suyos los vicios en que incurri el
tribunal de primera instancia, el cual al fallar se extendi a puntos no sometidos a su
decisin, al analizar el estado o calidad del inmueble arrendado, materia que no form
parte de las consideraciones de la demanda.
b).- La causal del artculo 768 N 7 del Cdigo de Procedimiento Civil, esto es, contener
decisiones contradictorias.
Sostiene que resulta contradictorio que los jueces del mrito hayan reconocido en sus
sentencias que entre las partes existieron negociaciones previas referentes a la duracin
del contrato y a la forma de ponerle trmino, cuya extensin y alcance se acredit con
documentos y testigos que depusieron en el juicio y, no obstante ello, se termine
concluyendo que el arrendatario se encontraba facultado para poner trmino al contrato
sin expresin de causa;
SEGUNDO: Que el cargo que se fundamenta en la causal N 4 del artculo 768 de Cdigo
de Procedimiento Civil, deber ser desestimado, ya que los hechos sealados por el
recurrente no configuran la causal invocada.
En efecto , cabe recordar que la doctrina comparada ve en la denominada ultra petita ms all de lo pedido-, un vicio que ataca un principio rector de la actividad procesal, cual
es, el principio de la congruencia y ese ataque se produce, precisamente, con la
"incongruencia".
540
Por otra parte, resulta oportuno sealar que en el derecho comparado se ha resuelto que
la congruencia consiste en el deber de los rganos judiciales de decidir los litigios que a
su consideracin se hayan sometidos, dando respuesta a las distintas pretensiones
formuladas por las partes a lo largo del proceso, a todas ellas, pero slo a ellas, evitando
que se produzca un desajuste entre el fallo judicial y los trminos en que las partes
formularon sus pretensiones.
Que ahora bien, del mrito de los autos y de lo resuelto por los jueces de fondo en la
sentencia impugnada se puede constatar que el fallo se limita a resolver lo pedido,
rechazando la demanda principal y acogiendo la demanda reconvencional, en los
trminos en que dichas pretensiones fueron planteadas, en concordancia con las
defensas opuestas oportunamente a cada una de ellas, no advirtindose pronunciamiento
alguno que pudiera corresponder a una accin o excepcin no alegadas por las partes;
541
CUARTO: Que el recurrente sostiene que la sentencia de segundo grado, que confirm el
fallo del tribunal a quo, rechazando, en definitiva, la demanda principal y acogiendo la
demanda reconvencional, ha sido dictada con infraccin a los artculos 1560, 1563 y
1566 del Cdigo Civil, segn pasa a explicar: Argumenta que los sentenciadores limitaron
la interpretacin del contrato al tenor literal de las palabras, texto que como consta en el
proceso, fue elaborado por el abogado de la recurrida, desconocindose la verdadera
voluntad de las partes.
Expresa que al haberse infringido las normas sobre interpretacin contractual, se vulner
tambin el artculo 1545 del Cdigo Civil, en cuanto dispone que "todo contrato
legalmente celebrado es una ley para los contratantes y no puede ser invalidado sino por
su consentimiento mutuo o por causas legales".
Sostiene que la"clusula diplomtica" es una estipulacin de uso comn en los contratos
de arrendamiento en los que el arrendatario es una persona extranjera, quien
normalmente arrienda el inmueble amoblado.
542
QUINTO: Que los jueces de la instancia dieron por establecidos como hechos de la
causa, relevantes para la decisin de la controversia sub lite, los siguientes:
b).- Que el inmueble ubicado en calle El Nogal N 1511, comuna de Lo Barnechea, sera
destinado por la arrendataria, a servir de residencia a don Kevin Starling, ejecutivo
extranjero de la empresa, y a su familia.
c).- Que la renta mensual pactada fue de US$ 3.556, pagadera los diez primeros das de
cada mes.
f).- Que la clusula tercera del contrato otorgaba al arrendatario la facultad de terminar
anticipadamente el contrato, en forma unilateral y sin expresin de causa, siempre que
diera aviso al arrendador con cuarenta y cinco das de anticipacin.
g).- Que la facultad del arrendatario de poner trmino al contrato en la forma antes
referida, no se limit a la hiptesis de que don Kevin Starling tuviera que ausentarse del
pas.
543
h).- Que la redaccin de la clusula tercera fue aceptada por las partes en el marco de
una negociacin previa. i).- Que con fecha 16 de marzo de 2001, la demandada envi
carta aviso a los demandantes, manifestando su intencin de poner trmino al contrato de
arrendamiento a contar del da 30 de abril del 2001.
k).- Que la clusula dcimo segunda del contrato de arrendamiento establece, respecto
de la garanta entregada por la arrendataria, que debe ser devuelta transcurrido el plazo
de noventa das siguientes a la restitucin de la propiedad.
l).- Que la propiedad fue devuelta conforme a su arrendador con fecha 27 de abril de 2001
y que las cuentas bsicas de consumo se encontraban pagadas a la fecha de trmino del
contrato;
SEXTO: Que la cita de las disposiciones legales denunciadas por el recurrente, expuestas
previamente en el motivo cuarto y los argumentos esgrimidos en apoyo de sus
afirmaciones en tal sentido, tienen por objeto sustentar fundamentalmente que los
sentenciadores del mrito habran incurrido en infraccin a las normas sobre
interpretacin de los contratos, al concluir que la estipulacin tercera del contrato de
arrendamiento otorgaba al arrendatario la facultad de ponerle termino anticipadamente, en
forma unilateral y sin expresin de causa, siempre que diera aviso al arrendador con
cuarenta y cinco das de antelacin, en circunstancias que, segn sostiene el actor, la
intencin de las partes habra sido la de convenir una clusula diplomtica, que
concediera al arrendatario la facultad de poner trmino al contrato en forma anticipada en
el solo evento de tener que abandonar el pas por cualquier causa;
544
Por su parte el artculo 1563 del referido estatuto legal dispone que "En aquellos casos en
que no apareciere voluntad contraria deber estarse a la interpretacin que mejor cuadre
con la naturaleza del contrato.
Finalmente el artculo 1566 del cdigo sustantivo prev que "No pudiendo aplicarse
ninguna de las reglas precedentes de interpretacin, se interpretarn las clusulas
ambiguas a favor del deudor.
Pero las clusulas ambiguas que hayan sido extendidas o dictadas por una de las partes,
sea acreedora o deudora, se interpretarn contra ella, siempre que la ambigedad
provenga de la falta de una explicacin que haya debido darse por ella";
NOVENO: Que en este orden de ideas, es preciso tener en cuenta que la interpretacin
de los contratos queda dentro de las facultades propias de los magistrados de la
instancia, los que pueden ser revisados por esta Corte de Casacin en el evento que por
tal labor se desnaturalice el acuerdo al que ellas han llegado, transgredindose con lo
anterior la ley del contrato prevista en el artculo 1545 del Cdigo Civil, adems, de las
disposiciones pertinentes a la interpretacin de los contratos. Ello ocurre, ciertamente,
cuando se alteran las consecuencias de sus clusulas, desnaturalizndolas y, en tales
circunstancias, "el poder soberano de los jueces del pleito para establecer los hechos de
la causa, no puede extenderse a su apreciacin jurdica y a la determinacin de la ley que
les sea aplicable; y por consiguiente la ilegal apreciacin de las clusulas del contrato y
las errneas consecuencias que de esta ilegal apreciacin deduzcan los jueces del pleito
deben ser sometidas a la censura de la Corte Suprema por medio del recurso de casacin
545
por violacin del artculo 1545, o sea por violacin de la ley del contrato.". (Luis Claro
Solar, "Derecho Civil Chileno y Comparado", pg. 474);
DECIMO: Que la labor interpretativa de los actos y contratos tiene por objeto conocer la
intencin comn de los contratantes, la voluntad que han expresado al celebrarlo, aquello
en lo que han consentido, lo cual les uni y determin que contrataran, aspecto que,
conforme al artculo 1560 del Cdigo Civil, debe conocerse "claramente" para estarse a
ella ms que al texto del acuerdo.
En segundo lugar corresponde realizar la labor interpretativa del convenio, para lo cual se
considerar especialmente la utilidad de las clusulas del contrato, debiendo preferirse el
sentido en que pueden producir algn efecto, como tambin tener presente el riesgo de
redaccin del texto de la convencin. En esta labor, se ha dicho, que el sistema subjetivo
de interpretacin de los contratos se atenu al agregarse en el referido artculo 1560 del
Cdigo Civil el adverbio "claramente", por lo que se recurrir a la intencin de las partes
en la convencin o contrato cuando ella se desprenda y distinga perfectamente, no
resultando procedente construir intenciones o voluntades presuntas o virtuales, sino que
se debe recurrir a otros criterios de interpretacin o mejor dicho de determinacin de la
voluntad, con un carcter ms objetivo;
se puede observar su intencin de distinguir entre las que se extraen del contrato mismo,
de aquellas que se desprenden de las circunstancias de la especie o que reflejan un
comportamiento de las partes, conforme a lo que estimaron fue el acto o contrato
celebrado.
La doctrina ha tenido la oportunidad de estudiar este punto precisando que "la existencia
de una convencin (cuestin de prueba) y el alcance de una convencin (cuestin de
interpretacin) son dos aspectos diferentes, que no deben confundirse". (Jorge Lpez
Santa Mara, "Sistemas De Interpretacin De Los Contratos", Ediciones Universitarias de
Valparaso, 1971, pgina 66).
As, la interpretacin resulta necesaria cuando los trminos de una convencin suscitan
controversia entre las partes respecto de los distintos efectos que han de tener sus
estipulaciones. En esta labor se han clasificado las reglas legales entre aquellas referidas
al contrato propiamente tal y las que reflejan un comportamiento o acceden al contrato
mismo.
De esta forma se puede sealar, siguiendo al profesor Lpez Santa Mara, que existen
reglas de interpretacin intrnsecas al contrato, que en nuestro pas estn constituidas
por: a).- Armona de las clusulas (artculo 1564 del Cdigo Civil); b).- Utilidad de las
clusulas (artculo 1562); y c).- Trminos ambiguos (artculo 1563 inciso primero).
Enunciado lo que es el principio del respeto al proceder individual y que obrar contra acto
propio no vale, la interpretacin autntica se presenta como una de las de mayor
importancia. Subrayando su capital importancia los autores chilenos, Claro Solar, por
ejemplo, estiman que en un eventual orden de prelacin, ella debera figurar
547
548
Ahora bien, numerosa legislacin que se inicia con la dictacin del Decreto Ley 520, de 20
de agosto de 1932, reglament con ms especificidad el contrato de arrendamiento de
predios urbanos, encontrndose actualmente vigente la Ley 18.101, la qu e sufri una
modificacin sustancial con motivo de la dictacin de la Ley 19.866, publicada en el Diario
Oficial el 11 de abril de 2003.
Pues bien, el artculo 4 de la Ley 18.101, ubicado, como se dijo, en el ttulo de la ley
referido al desahucio y la restitucin, destina el inciso primero a regular los efectos del
desahucio del arrendador y el inciso segundo es bastante claro en permitir al arrendatario
restituir el inmueble an antes de vencer el plazo fijado primitivamente para la restitucin,
quedando obligado a pagar la renta hasta el da en que dicha restitucin se materialice.
En este punto del razonamiento debe necesariamente recordarse lo dispuesto en el
artculo 19 de la Ley 18.101, conforme al cual, son irrenunciables los derechos que esta
ley confiere a los arrendatarios. Por consiguiente, el hecho de haberse pactado un
contrato de arrendamiento por el plazo de dieciocho meses, independientemente de que
el recurrente discuta la real intencin de las partes al establecer la clusula tercera del
contrato que, como se ha sealado, facultaba expresamente al arrendatario para poner
trmino al contrato, en forma unilateral y sin expresin de causa, siempre que diera aviso
al arrendador con cuarenta y cinco das de anticipacin, no puede entenderse que importa
549
En una situacin como la propuesta nicamente cabra exigir al arrendatario que pretende
ejercer el derecho irrenunciable que le confiere el precepto citado, dar cumplimiento a lo
establecido en el artculo 1976 del Cdigo Civil -aplicable en virtud de lo estatuido en la
parte final del inciso primero del artculo 1 de la Ley 18.101-, esto es, dar el aviso de
desahucio con la anticipacin expresamente convenida o de no existir aquella con una
antelacin de un periodo entero de los designados por la convencin o la ley para el pago
de la renta. Esta exigencia, conforme fijaron los magistrados como hecho de la causa, fue
cabalmente satisfecha por la demandada;
DECIMO CUARTO: Que en las condiciones descritas, slo cabe concluir que al
desestimar los sentenciadores la demanda principal que dio origen al litigio, a cogiendo
consecuencialmente la demanda reconvencional destinada a obtener el reintegro del valor
entregado a ttulo de garanta, no han incurrido en los errores de derecho que se le
atribuyen en el recurso, motivo por el cual la casacin en el fondo interpuesta debe ser
desestimada. Por estas consideraciones y lo preceptuado en los artculos 765, 767 y
768 del Cdigo de Procedimiento Civil, se rechazan los recursos de casacin en la forma
y en el fondo, deducidos ambos a fojas 542, por el abogado don Jos Luis Honorato San
Romn, en representacin de la parte demandante, en contra de la sentencia de catorce
de enero de dos mil ocho, escrita a fojas 538.
N 3.881-08.-
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sr. Sergio Muoz
G., Sra. Margarita Herreros M. y Sr. Juan Araya E. y Abogados Integrantes Sres. Nelson
Pozo S. y Domingo Hernndez E.
550
Tema Clave
Tribunal
Considerando
5. y 6.
2.- () En este sentido el artculo 1552 del Cdigo Civil prescribe que: "En los contratos
bilaterales ninguno de los contratantes est en mora dejando de cumplir lo pactado,
mientras el otro no lo cumple por su parte, o no se allana a cumplirlo en la forma y tiempo
debidos."
551
Tambin la doctrina ha sealado que "el principio primario sobre el cual reposa la exceptio
non adimpleti contractus es, sin duda, la equidad" "Por consiguiente, para que tenga
cabida la excepcin de inejecucin se requiere en primer lugar que exista entre las partes
una relacin sinalagmtica obligatoria, en que la parte perseguida sea efectivamente
deudora de una prestacin emanada de esta relacin y al mismo tiempo acreedora de una
contraprestacin no efectuada aun por la otra parte. El Cdigo se refiere expresamente a
los contratos bilaterales; y por lo mismo, a los llamados bilaterales perfectos que al
perfeccionarse dan nacimiento a dos obligaciones recprocas que afectan una a una de
las partes y la otra a la otra parte." (Luis Claro Solar, Derecho Civil Chileno y Comparado,
pg. 788). "La excepcin de contrato no cumplido entronca en un principio de carcter
ms general en el Derecho: no puede exigirse lo que no se est dispuesto a dar. La
552
No puede dejar de hacerse presente que "La excepcin del contrato no cumplido tiene un
efecto meramente paralizador; mediante el cual el deudor impide que se esfuerza cumplir
mientras su contraparte no lo haga a su vez, pero no le sirve directamente para obtener el
cumplimiento recproco. Por ello es que Messineo la califica de causal legal de
suspensin del cumplimiento." (Ren Abeliuk Ob. Cit. Pg.600) "Tiene un efecto
meramente paralizador de la demanda contraria, pero no la fuerza sino indirectamente a
cumplir. Normalmente el acreedor se allanar a hacerlo para poder pedir la resolucin o el
cumplimiento, pero bien puede ocurrir que ninguna de las partes quiera cumplir, en cuyo
caso si no lo hacen de comn acuerdo no hay solucin de legal para poner trmino al
contrato, que quedar en el aire hasta que alguna de las partes se decida a cumplir o se
venzan los plazos de prescripcin." (Ob. Cit. Pg. 345) "En principio el efecto de la
excepcin nicamente es provisorio: se suspende la condena a que el demandado pague
su prestacin hasta que el demandante cumpla o se allane cumplir lo que pide en virtud
del contrato bilateral. Una vez opuesta la excepcin por el contratante demandado, si
tiene fundamentos se produce el efecto de presin o coaccin sobre el otro litigante, a fin
de que a su turno cumpla lo que le corresponde segn el contrato. Pero la suspensin
transitoria del contrato puede prolongarse si ninguno de los contratantes cede." (Jorge
Lpez Santa Mara "Los Contratos. Parte General. Editorial jurdica. Pgina 418)
6 Que resultan ser presupuestos para oponer la excepcin del contrato no cumplido los
siguientes: 1) se aplica los contratos bilaterales; 2) es necesario que la contraparte contra
quien se opone la excepcin no haya cumplido ni se allane a cumplir alguna obligacin
emanada del mismo contrato; 3) es necesario que la obligacin del acreedor contra quien
se opone la excepcin sea exigible y 4) la buena fe del que opone la excepcin.
De forma que no puede tenerse por cumplido el requisito mencionado cuando la parte
553
10 Que por otra parte la actora solicit, por concepto de clusula penal, el equivalente a
un 25% de las rentas que se encuentran pendientes de vencimiento, equivalentes a
3694,60 UF, fundado en lo estatuido en la clusula dcimo sptima del contrato que
precepta textualmente: "El incumplimiento de cualquiera de las obligaciones que asume
la subarrendataria en el presente contrato y especialmente la falta de pago de una cuales
quiera de las rentas pactadas en la clusula quinta, o atrasos reiterados en el pago de
dichas rentas, facultar a la subarrendadora para ejercer, a su opcin, cualquiera de los
siguientes derechos: A) dar por terminado ipso facto el contrato, sin necesidad de trmite
ni declaracin judicial alguna y, por lo tanto, exigir la inmediata devolucin de los bienes
arrendados retirndolos del lugar en que se encuentren para trasladarlos al lugar de su
eleccin ms el pago de la totalidad de las rentas vencidas. Adems, por concepto de
clusula penal, tendr derecho a cobrar un 25% de las rentas que se encuentren
pendientes de vencimiento a la fecha del incumplimiento, suma que se establece como
avaluacin anticipada de los perjuicios que se le causen a la subarrendadora. En tal caso,
la sociedad subarrendadora estar facultada para entrar a los lugares en que se
encontraren los bienes materia de este contrato y retirarlos de inmediato, sin autorizacin
judicial ni intervencin de autoridad alguna, ya que el subarrendatario le presta
autorizacin desde ya en trminos absolutamente irrevocables." Estas estipulaciones
tienen la connotacin de establecer un pacto expreso de las partes para regular los
efectos ante el incumplimiento, de modo que la naturaleza jurdica es de una clusula
penal, que permite ser calificada de compensatoria.
26. REGLA .
554
b.- Los presupuestos para oponer la excepcin del contrato no cumplido son los
siguientes: 1) se aplica los contratos bilaterales; 2) es necesario que la contraparte contra
quien se opone la excepcin no haya cumplido ni se allane a cumplir alguna obligacin
emanada del mismo contrato; 3) es necesario que la obligacin del acreedor contra quien
se opone la excepcin sea exigible y 4) la buena fe del que opone la excepcin. No puede
tenerse por cumplido el segundo requisito mencionado cuando la parte contra quien se
interpone la excepcin se allan a cumplir la prestacin que le corresponda y lo hizo
antes de la presentacin de la demanda a distribucin.
Corte Suprema
Fallo:
555
VISTOS:
En estos autos rol Nro. 5181-2002, seguidos ante el Cuarto Juzgado Civil de Santiago
sobre juicio sumario de terminacin de contrato de subarrendamiento y cobro de otras
prestaciones que indica, por demanda interpuesta por "Empresa de Transporte de
Pasajeros Alvaro Fantini G. Limitada" en contra de "Transporte y Turismo Coln Limitada"
y de "Carlos Moreira Prez", por sentencia escrita a fojas 137 y siguientes, de veintiocho
de enero de dos mil cuatro, se rechaz, con costas, la demanda.
La actora interpuso recurso de apelacin en contra de dicho fallo y una Sala de la Corte
de Apelaciones de Santiago, por resolucin de veintisis de mayo de dos mil ocho, escrita
a fojas 192, lo confirm.
Y TENIENDO EN CONSIDERACIN:
CUARTO: Que con fecha 06 de marzo de 2003, segn consta de la presentacin de fojas
110, la demandada se allan a la restitucin de los vehculos objeto del contrato,
agregando que lo hace en consideracin a que su parte tambin ha interpuesto accin de
terminacin por el incumplimiento de su contraparte, ante el 16 Juzgado Civil de Santiago,
en atencin a que tales bienes no son susceptibles de explotacin comercial. Luego, de
acuerdo al acta agregada a fojas 116, con data 10 de abril de 2003 se llev a cabo la
entrega material de los buses sobre los cuales recae este litigio.
QUINTO: Que, el Cdigo de Procedimiento Civil, en los artculos 169, 170 y 171 regul la
forma de las sentencias.
En este contexto surge toda la distincin racional sobre lo que efectivamente constituye el
fundamento del fallo por parte de los jueces, distinguiendo lo que son las motivaciones,
fundamentaciones, justificaciones y argumentaciones, resolvindose por la jurisprudencia
comparada que hay ausencia de fundamento tanto cuando ste se encuentra ausente,
como cuando la ausencia es parcial o son insuficientes los expresados, al igual que al
existir incoherencia interna, arbitrariedad e irrazonabilidad.
"4 Pone de manifiesto la vinculacin del Juez a la Ley" (Sentencia del Tribunal
Constitucional espaol, de 5 de febrero de 1987).
SEXTO: Que los jueces, para dar estricto cumplimiento a lo dispuesto por el constituyente
y el legislador, necesariamente, han debido emitir pronunciamiento en relacin con el
allanamiento de la demandada con respecto a la entrega de los bienes objeto del contrato
cuya terminacin precisamente se persigue en el caso sub lite, hecho que materialmente
se verific durante la tramitacin del proceso, segn consta del acta de fojas 116, y el cual
importa una manifestacin de voluntad de la cual forzosamente devienen consecuencias
jurdicas, razn por la que resultaba exigible a los sentenciadores el establecimiento de
las consideraciones de hecho correspondientes en tal sentido y las consecuentes
fundamentaciones de derecho que de aqul presupuesto fctico se derivan.
NOVENO: Que el artculo 775 del referido Cdigo Procesal, dispone que pueden los
tribunales, conociendo por va de apelacin, consulta o casacin o en alguna incidencia,
invalidar de oficio las sentencias, cuando los antecedentes del recurso manifiesten que
ellas adolecen de vicios que dan lugar a la casacin en la forma, situacin que se
presenta en el presente caso como se demostr en los considerandos anteriores, puesto
que las fundamentaciones que se extraan resultaban relevantes para los fines de decidir
acertadamente acerca de la pretensin y excepciones opuestas, lo cual hace que el fallo
en comento incurra en un vicio de invalidez que obliga a este tribunal a declarar de oficio
su nulidad, desde que ese error influye sustancialmente en lo dispositivo de tal resolucin
y que es menester declarar, an cuando no se haya invitado a los abogados a alegar
sobre la causal de nulidad, ya que el defecto se pudo determinar en el estado de acuerdo
del recurso de casacin en el fondo, deducido por la demandada. Por estas
consideraciones y visto, adems, lo dispuesto en los artculos 766, 768 N 5, 786 y
808 del Cdigo de Procedimiento Civil, se anula de oficio la sentencia de la Corte de
Apelaciones de Santiago, de once de octubre de veintisis de mayo de dos mil ocho,
escrita a fojas 19 2, la que se reemplaza por la que se dicta a continuacin,
separadamente, pero sin nueva vista.
Regstrese.
560
Rol N 4545-08.-
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sr. Sergio Muoz
G., Sra. Margarita Herreros M., Sres. Juan Araya E. y Guillermo Silva G. y Abogado
Integrante Sr. Domingo Hernndez E.
Vistos:
1.- Que ha quedado establecida la existencia del contrato en que la demandante finca
sus pretensiones, por no haber sido un hecho controvertido por las partes, encontrndose,
adems, acreditada con el documento de fojas 1, acompaado por la actora, con citacin
y sin que fuere objetado, y cuyos aspectos fundamentales se fijaron en el fallo de primer
grado, se puede concluir que las partes acordaron, con fecha 25 de febrero de 2002, un
contrato de subarrendamiento con opcin de compra, en virtud del cual la actora le dio en
subarriendo a la sociedad demandada siete buses, los cuales se individualizan en la
clusula primera del mismo. Se acord que el subarrendamiento tendra una duracin de
36 meses contados desde la entrega de los bienes arrendados, la que se efectu con
fecha 25 de febrero de 2002 y, la subarrendataria se oblig a pagar a la demandante 36
rentas de arrendamiento iguales, mensuales, sucesivas y anticipadas, ascendentes a 509,
60 unidades de fomento, IVA incluido, con vencimiento cada una de las mencionadas
561
obligaciones los das 25 de cada mes, a contar del 25 de marzo de 2002, siendo
pagaderas por perodos mensuales anticipados.
2.- Que en los trminos expuestos se acredit por la actora la fuente convencional de las
obligaciones de la parte demandada, las que no prob haber satisfecho, es ms, durante
la tramitacin del proceso, con fecha 06 de marzo de 2003, segn consta de la
presentacin de fojas 110, los demandados se allanaron a la restitucin de los vehculos
objeto del contrato, agregando que lo hacen en consideracin a que su parte tambin ha
interpuesto accin de terminacin por el incumplimiento de su contraparte, ante el 16
Juzgado Civil de Santiago, en atencin a que tales bienes no son susceptibles de
explotacin comercial. Entrega material que, segn consta del acta agregada a fojas 116,
se verific con data 10 de abril de 2003.
562
En este sentido el artculo 1552 del Cdigo Civil prescribe que: "En los contratos
bilaterales ninguno de los contratantes est en mora dejando de cumplir lo pactado,
mientras el otro no lo cumple por su parte, o no se allana a cumplirlo en la forma y tiempo
debidos."
indiscutible si se tiene presente que en los contratos bilaterales cada parte se obliga
teniendo como fin jurdico, como causa, el obtener la prestacin consentida por la otra
parte, y nada sera ms contrario a la nocin misma de la causa, consagrada como un
elemento fundamental de toda obligacin, si una parte hubiese de quedar obligada a
entregar lo que ha prometido sin recibir aquello que se le prometi a cambio". (Repertorio
de Legislacin y Jurisprudencia Chilena, Editorial Jurdica de Chile. Tercera Edicin. 1997,
Tomo V. pg. 276).
Tambin la doctrina ha sealado que "el principio primario sobre el cual reposa la exceptio
non adimpleti contractus es, sin duda, la equidad" "Por consiguiente, para que tenga
cabida la excepcin de inejecucin se requiere en primer lugar que exista entre las partes
una relacin sinalagmtica obligatoria, en que la parte perseguida sea efectivamente
deudora de una prestacin emanada de esta relacin y al mismo tiempo acreedora de una
contraprestacin no efectuada aun por la otra parte. El Cdigo se refiere expresamente a
los contratos bilaterales; y por lo mismo, a los llamados bilaterales perfectos que al
perfeccionarse dan nacimiento a dos obligaciones recprocas que afectan una a una de
las partes y la otra a la otra parte." (Luis Claro Solar, Derecho Civil Chileno y Comparado,
pg. 788). "La excepcin de contrato no cumplido entronca en un principio de carcter
ms general en el Derecho: no puede exigirse lo que no se est dispuesto a dar. La
buena fe debe presidir el Derecho, y evidentemente no la tiene el acreedor en esa
circunstancia". (Ren Abeliuk, "Las Obligaciones", Editorial Jurdica, N 941, pgina 596).
No puede dejar de hacerse presente que "La excepcin del contrato no cumplido tiene un
efecto meramente paralizador; mediante el cual el deudor impide que se esfuerza cumplir
mientras su contraparte no lo haga a su vez, pero no le sirve directamente para obtener el
cumplimiento recproco. Por ello es que Messineo la califica de causal legal de
suspensin del cumplimiento." (Ren Abeliuk Ob. Cit. Pg.600) "Tiene un efecto
meramente paralizador de la demanda contraria, pero no la fuerza sino indirectamente a
cumplir. Normalmente el acreedor se allanar a hacerlo para poder pedir la resolucin o el
cumplimiento, pero bien puede ocurrir que ninguna de las partes quiera cumplir, en cuyo
caso si no lo hacen de comn acuerdo no hay solucin de legal para poner trmino al
contrato, que quedar en el aire hasta que alguna de las partes se decida a cumplir o se
venzan los plazos de prescripcin." (Ob. Cit. Pg. 345) "En principio el efecto de la
excepcin nicamente es provisorio: se suspende la condena a que el demandado pague
su prestacin hasta que el demandante cumpla o se allane cumplir lo que pide en virtud
del contrato bilateral. Una vez opuesta la excepcin por el contratante demandado, si
tiene fundamentos se produce el efecto de presin o coaccin sobre el otro litigante, a fin
de que a su turno cumpla lo que le corresponde segn el contrato. Pero la suspensin
transitoria del contrato puede prolongarse si ninguno de los contratantes cede." (Jorge
Lpez Santa Mara "Los Contratos. Parte General. Editorial jurdica. Pgina 418)
564
En efecto, tanto la Ley 18.696 como la Ley 19.040 requieren, para la destinacin de
vehculos al servicio de trasporte pblico remunerado, de su inscripcin en el Registro
Nacional de Servicios de Transporte de Pasajeros, segn la reglamentacin del Ministerio
de Transporte. As, el artculo 10 de la ley 19.040 estatuye: "Los vehculos que se
destinen a servicios de transporte pblico remunerado de pasajeros debern estar
inscritos en el Registro Nacional de Servicios de Transporte de Pasajeros a que se refiere
el inciso sptimo del artculo 3 de la Ley N 18.696, segn lo determine la
correspondiente reglamentacin dictada por el Ministerio de Transportes y
Telecomunicaciones." Por su parte, el artculo 3 del DS N 212/92, previene que "la
inscripcin en el Registro Nacional ser requisito para la prestacin de servicios de
transporte pblico de pasajeros, cualquiera sea la modalidad de stos. En los vehculos
con que se presten estos servicios deber portarse el correspondiente certificado de
inscripcin en el Registro." Y, el artculo 17 del mismo Decreto Supremo prescribe que la
565
6 Que resultan ser presupuestos para oponer la excepcin del contrato no cumplido los
siguientes: 1) se aplica los contratos bilaterales; 2) es necesario que la contraparte contra
quien se opone la excepcin no haya cumplido ni se allane a cumplir alguna obligacin
emanada del mismo contrato; 3) es necesario que la obligacin del acreedor contra quien
se opone la excepcin sea exigible y 4) la buena fe del que opone la excepcin.
566
De forma que no puede tenerse por cumplido el requisito mencionado cuando la parte
contra quien se interpone la excepcin se allan a cumplir la prestacin que le
corresponda y lo hizo antes de la presentacin de la demanda a distribucin.
8.- Que zanjado lo anterior procede hacerse cargo de las peticiones contenidas en la
demanda, debiendo primeramente anotarse al respecto que las partes, de comn
acuerdo, han puesto trmino al contrato de arrendamiento en cuestin desde que,
habiendo sido pedida tal declaracin por la actora en su libelo, los demandados se
allanaron a la misma y luego le hicieron entrega a la demandante de los bienes objeto del
contrato, ponindolos a su disposicin. A su vez, tales mviles fueron aceptados y
recibidos por la demandante segn consta del acta de 10 de abril de 2003 que rola a fojas
116. De manera que el contrato no pudo extenderse ms all de dicha fecha porque
ambas partes han convenido en ello, resultando, por lo mismo innecesario efectuar
declaracin en tal sentido.
9 Que hacindose cargo de la solicitud relativa al pago de las rentas insolutas, debe
consignarse que lo manifestado en el considerando sptimo con ocasin de la excepcin
opuesta por la parte demandada, no impide reconocer, segn se dej sentado con
antelacin, que an cuando se haya salvado el obstculo que existi " referido a la
satisfaccin de las condiciones necesarias para que los bienes ingresaran a la actividad
del giro de la sociedad demandada " lo cierto es que en el periodo que medi entre la
fecha en que comenz a regir el subarrendamiento (25 de febrero de 2002) y la
cancelacin de la inscripcin de los buses en la Quinta Regin (24 de septiembre de
2002), los vehculos estuvieron vedados de ingresar al destino de transporte pblico de
pasajeros en la zona en la que la empresa demandada ejerce su comercio, pues no
reunan uno de los requisitos para ello, es decir, precisamente lo que la actora se oblig a
proporcionar. Al efecto, los instrumentos aportados por la demandante no resultan
suficientes para desvirtuar aqul aserto, toda vez que aunque algunos de los buses
subarrendados hayan circulado en la Octava Regin, como sucedera con el bus patente
SV-4483, ello no implica que la obligacin de la actora se haya cumplido, ms cuando
precisamente dicho vehculo es uno de aqullos respecto de los cuales el Seremi de
Transportes y Telecomunicaciones de la Regin del Bo-Bo, rechaz la solicitud de
567
inscripcin que se le hiciera, segn da cuenta el documento del oficio que se aprecia a
fojas 185.
10 Que por otra parte la actora solicit, por concepto de clusula penal, el equivalente a
un 25% de las rentas que se encuentran pendientes de vencimiento, equivalentes a
3694,60 UF, fundado en lo estatuido en la clusula dcimo sptima del contrato que
precepta textualmente: "El incumplimiento de cualquiera de las obligaciones que asume
la subarrendataria en el presente contrato y especialmente la falta de pago de una cuales
quiera de las rentas pactadas en la clusula quinta, o atrasos reiterados en el pago de
dichas rentas, facultar a la subarrendadora para ejercer, a su opcin, cualquiera de los
siguientes derechos: A) dar por terminado ipso facto el contrato, sin necesidad de trmite
ni declaracin judicial alguna y, por lo tanto, exigir la inmediata devolucin de los bienes
arrendados retirndolos del lugar en que se encuentren para trasladarlos al lugar de su
eleccin ms el pago de la totalidad de las rentas vencidas. Adems, por concepto de
clusula penal, tendr derecho a cobrar un 25% de las rentas que se encuentren
pendientes de vencimiento a la fecha del incumplimiento, suma que se establece como
avaluacin anticipada de los perjuicios que se le causen a la subarrendadora. En tal caso,
la sociedad subarrendadora estar facultada para entrar a los lugares en que se
encontraren los bienes materia de este contrato y retirarlos de inmediato, sin autorizacin
judicial ni intervencin de autoridad alguna, ya que el subarrendatario le presta
autorizacin desde ya en trminos absolutamente irrevocables." Estas estipulaciones
tienen la connotacin de establecer un pacto expreso de las partes para regular los
efectos ante el incumplimiento, de modo que la naturaleza jurdica es de una clusula
penal, que permite ser calificada de compensatoria.
obligaciones que jurdicamente las justifica. De esta manera, y en coherencia con lo que
se ha venido diciendo, si las partes estuvieron de acuerdo en terminar el contrato de
subarrendamiento que las ligaba y la demandada entreg los bienes que eran objeto del
mismo, siendo recibidos por el subarrendador, segn ha quedado determinado en el
motivo octavo que precede, la clusula penal acordada carece de justificacin. A lo
anterior debe an tenerse en consideracin que la imposibilidad que afect a la
demandada para utilizar los buses de acuerdo con su giro, slo finaliz das antes de la
interposicin de la demanda de autos, motivo por el cual no puede estimarse que a dicha
data aqulla se haba colocado en la situacin que permita la aplicacin de la clusula
penal acordada en la convencin. Por lo anterior la demanda en esta parte ser
desestimada.
I.- Se omite pronunciamiento sobre el trmino del contrato, en razn de la decisin de las
partes adoptada de comn acuerdo en tal sentido y en cuanto a la restitucin de los
bienes subarrendada por encontrarse aqullos en poder de la actora.
II.- Se revoca la sentencia apelada, de veintiocho de enero de dos mil cuatro, escrita de
fojas 137 a 145, en cuanto por ella se rechaz la demanda de fojas 19 modificada a fojas
28, en todas sus partes, y en su lugar se dispone que se la acoge slo en cuanto:
569
Rol N 4545-08
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sr. Sergio Muoz
G., Sra. Margarita Herreros M., Sres. Juan Araya E. y Guillermo Silva G. y Abogado
Integrante Sr. Domingo Hernndez E.
570
Tema Clave
Incumplimiento
Obligacin de hacer.
Tribunal
de C. Suprema
Accin de cumplimiento
C. Suprema
Considerando
5. y 6.
7.
Esta interpretacin se ajusta a los principios que integran el Cdigo Civil, por cuanto no se
observan las particulares motivaciones que podran inducir a privar a los afectados de
dirigir las acciones en la forma y del modo como mejor se ajusten a sus intereses, desde
el momento que el derecho civil otorga a las personas el principio de libre disposicin de
sus bienes y autonoma de la voluntad, todo lo cual lleva a reconocer las mayores
prerrogativas al momento de someter las pretensiones al rgano jurisdiccional. Es por lo
anterior que esta Corte Suprema ha reconocido de manera reiterada la independencia y
autonoma de las acciones indemnizatorias, sean estas moratorias o perentorias, las que
cualquiera sea la naturaleza del objeto de la prestacin, puede impetrarse en forma
exclusiva, desde el momento que el legislador ha establecido su procedencia y la forma
ms usual de interposicin, pero no ha prohibido la que en mejor forma repare
integralmente el dao derivado del incumplimiento.
SEXTO: Que en razn de lo antes dicho, la accin deducida por la sociedad demandante
reconvencional resultaba jurdicamente procedente y al ser notificada a la parte
demandada, cabe afirmar, como acertadamente lo establecieron los jueces del grado, que
la constituy a sta en mora, de conformidad con la regla del N 3 del artculo 1551 del
Cdigo Civil. De este modo, aparece que la decisin impugnada no incurri en el error de
derecho que se le atribuye en el recurso.
SEPTIMO: Que en cuanto a la vulneracin del artculo 160 del Cdigo de Comercio, cabe
tener presente que dicha norma alude a la falta de reclamacin de la factura dentro del
plazo de ocho das y se refiere ms bien a que dicho instrumento se haya extendido de
acuerdo al servicio y precio contratado, lo que no impide deducir las acciones
correspondientes por el incumplimiento de las obligaciones de quien presta el servicio,
ms an si en la especie, se constat el estado de la fruta despus de embarcada y una
vez que lleg al puerto de destino.
En concepto de esta Corte no resulta vulnerada dicha norma, toda vez que nos
encontramos frente a una accin que pretende se declare la obligacin de la demandada
reconvencional de indemnizar perjuicios, como consecuencia de un incumplimiento de
una obligacin contractual, materias que se encuentran regladas por el derecho comn
572
estatuido en las disposiciones pertinentes contenidas en el Cdigo Civil, siendo por ello
improcedente la aplicacin de normativa especial establecida por el legislador con fines
distintos a los referidos y que dicen relacin con el reclamo sobre el contenido de la
factura.
Por otra parte, en tanto la sentencia objeto del recurso ha tenido por probado el
incumplimiento defectuoso del servicio prestado por el demandado reconvencional, no
resulta posible a esta Corte de Casacin arribar a la conclusin que pretende la
recurrente, esto es, que la demandante principal ha cumplido la obligacin que le impuso
el contrato, en tanto no se ha denunciado, la vulneracin de las normas reguladoras de la
prueba. (Pese a referirse a un artculo del C. de Comercio, me pareci poda ser
atingente.)
30. REGLA .
a.- El derecho que confiere el N 3 del artculo 1553, se est refiriendo a la indemnizacin
compensatoria, pues el enunciado de la norma deja a salvo siempre el derecho a pedir se
le indemnicen los perjuicios moratorios.
b.- El artculo 160 del C. Com, alude a la falta de reclamacin de la factura dentro del
plazo de ocho das, y se refiere ms bien a que dicho instrumento se haya extendido de
acuerdo al servicio y precio contratado, lo que no impide deducir las acciones
correspondientes por el incumplimiento de las obligaciones de quien presta el servicio.
573
Corte Suprema
Fallo:
Vistos:
En estos autos Rol N 2554-2001, seguidos ante el Vigsimo Cuarto Juzgado Civil de
Santiago, procedimiento ordinario caratulado "Agroindustria San Vicente S.A con
Exportadora Aconcagua Ltda.", don Juan Miguel Ugarte Correa en representacin de
Agroindustria San Vicente S.A deduce demanda de cobro de pesos en contra de
Sociedad Exportadora Aconcagua Limitada, representada por don Alejandro Barros
Aldunate a fin de que se declare su obligacin de pagar a la demandante la cantidad de $
9.648.011, ms intereses, reajustes y costas.
Seala que la sociedad demandada le adeuda la suma antes indicada, por la prestacin
de servicios en proceso de seleccin y embalaje de fruta de exportacin, la que ha sido
documentada mediante las 9 facturas que individualiza.
Explica que la fruta era entregada al actor a granel y estaba contenida en bins, es decir un
recipiente con capacidad para cargar aproximadamente 350 kilos, luego de recibida por el
actor esta proceda a enfriarla en la cmara a cero grado centgrado a la espera de su
embalaje. Este ltimo proceso deba consistir en la seleccin de la fruta que se exportara,
su calibracin y luego empacarla en envases que la demandada le proporcionara.
Asevera que las temperaturas registradas en las cmaras de Agrosan oscilaron entre los
0,2 C y los 12 C, por lote, es decir, en un mismo lote de cajas muestreado y en una
misma oportunidad de medicin, el lote tena una variabilidad de temperatura entre los
575
0,2 C y los 12 C, lo que implica que si la pulpa de fruta tena una temperatura de 12C
necesariamente se gatillara una rpida madurez hacindola susceptible de
ablandamiento, desarrollo de hongos y afectando y acortando su vida post cosecha. Por
lo que concluye que el enfriamiento que dio la demandante a la fruta entregada por
Aconex durante esa temporada no fue el adecuado, no fue constante ni correcto, ni
menos an fue la temperatura acordad a con Aconex , esto es, 0C.
Indica que esto fue lo que ocurri con la fruta adquirida de los dos productores antes
individualizados, los daos fueron descubiertos cuando la fruta fue desembarcada en el
lugar de destino un mercado de primer nivel, en el puerto de Vlissingen, Holanda, la fruta
estaba en una mala condicin de conservacin, podrida y con exceso de maduracin.
Postula que tal estado fue provocado por un hongo identificado como RHIZOPUS, el que
necesita como condicin para su desarrollo una temperatura de ambiente mayor a 7C, en
circunstancia que la temperatura de conservacin es de 0C, lo que signific que una
parte de la fruta se destinara a la venta en el mercado secundario o mayorista, de
segundo nivel y la otra tuvo que ser botada, con las consecuentes prdidas que ello
implica.
Descarta que este estado de arribo de esa fruta se haya debido al tratamiento de fro
dado durante el transporte en el barco, porque el registro de temperatura de la cmara
frigorfica de ambos barcos indicaba 0C.
En resumen, expresa, que el actor no cumpli con las obligaciones de prestar los
servicios contratados en las condiciones convenidas, especialmente en lo relativo al
tratamiento de fro que debi darle a la fruta antes de su embalaje, en particular a la fruta
que adquiri de los productores Pardo y Hoces.
En vista del grave incumplimiento de la actora, su parte no pag parte del precio
convenido por los servicios que se cobran.
Explica que la prdida para la demandada por la venta en destino de la fruta adquirida a
los productores antes singularizados, result ser la cantidad de US$ 51.346, 40. En mrito
de lo expuesto, y en lo que atae al presente recurso, opuso la excepcin de contrato no
cumplido, prevista en el artculo 1552 del Cdigo Civil, pues la demandante incumpli con
su obligacin de dar a la fruta el tratamiento de fro antes de su embalaje en las
576
condiciones contratadas respecto de toda la fruta recibida, lo que origin que la fruta
resultara con dao, por lo que su parte justificadamente no cumpli con su obligacin de
pagar una parte del precio de los servicios contratados a que se refieren las facturas que
se cobran en estos autos.
Por lo que estima que oper en su favor la excepcin de contrato no cumplido, prescrita
en el artculo 1552 del Cdigo Civil .
Funda la demanda en los mismos hechos expuestos en la contestacin los que da por
reproducidos.
Seala, que los hechos expuestos le ocasionaron una prdida a Exportadora Aconcagua
Limitada, Aconex, consistente en la obtencin de un menor precio de venta en relacin
con el precio de venta convenido originalmente con el comprador en destino, precio FOB,
antes que la fruta fuere despachada y que por cierto tal comprador no pag el precio
original sino que uno menor.
En otro caso su representada no recibi ningn precio, pues la fruta fue vendida a un
precio nfimo que no alcanz a cubrir los costos incurridos e involucrados para ponerla en
el lugar de destino o debi ser botada.
En el caso de la fruta que fue vendida a un precio nfimo, dicho precio no fue suficiente
para cubrir los costos, los que fueron ms altos que el precio de venta. Al cumplir de un
modo deficiente y malamente la demandada reconvencional su obligacin de dar un
servicio de fro adecuado, 0 C para la fruta de exportacin, incurri en mora de acuerdo
al artculo 1551 N 1 del Cdigo Civil.
577
Demanda el lucro cesante, esto es, lo que su representada dej de obtener por haber sido
vendida la fruta en un valor inferior al acordado, como tambin la prdida consistente en
que el precio obtenido fue tal efmero que no alcanz a cubrir los costos incurridos.
Mediante sentencia de treinta de mayo de dos mil tres, escrita a fojas 578, la jueza
subrogante rechaz la demanda principal y acogi la excepcin de contrato no cumplido,
desestimando la demanda reconvencional del primer otros de fojas 43, disponiendo que
cada parte pague sus costas. Ambas partes se alzaron en contra del referido fallo y una
de las Salas de la Corte de Apelaciones de Santiago, por resolucin de veintids de enero
de dos mil ocho, aclarada mediante resolucin de diez de marzo del mismo ao, que se
leen a fojas 649 y 657, la revoc slo en cuanto por ella rechaza la demanda
reconvencional interpuesta por Exportadora Aconcagua Ltda. en contra de Agroindustria
San Vicente S.A y en su lugar la acogi, disponiendo que esta ltima debe pagar a
aquella como indemnizacin de perjuicios la cantidad de US$ 51.302,72, e equivalente al
tipo de cambio observado vigente a la poca del pago, con costas; confirmndola en los
dems apelado.
578
Indica que la sentencia censurada omite pronunciarse sobre el efecto y alcance del
artculo 160 inciso segundo del Cdigo de Comercio, que establece que "no
reclamndose contra el contenido de la factura dentro de los ocho das siguientes a la
entrega de ella, se tendr por irrevocablemente aceptada".
SEGUNDO: Que son hechos de la causa, establecidos por los jueces del fondo e
inamovibles para este Tribunal de casacin al no haberse denunciado la vulneracin a las
normas que gobiernan la prueba, de acuerdo con lo que dispone el artculo 785 del
Cdigo de Procedimiento Civil , los que siguen:
579
Sobre la base de los hechos establecidos precedentemente, los jueces del grado
decidieron acoger la excepcin de contrato no cumplido y por ende rechazar la demanda
principal; y acoger la reconvencional de la manera reseada en lo expositivo de esta
sentencia.
580
CUARTO: Que el recurso estima vulnerados los artculos 1553 y 1478 (sic) del Cdigo
Civil (artculo 1489), captulo de impugnacin que deber ser rechazado segn el
siguiente anlisis. El problema planteado radica en dilucidar si, tratndose del
incumplimiento de una obligacin de hacer, puede el acreedor demandar nicamente la
indemnizacin de los perjuicios sufridos o debe tambin y necesariamente, solicitar se
declare resuelto el contrato o su cumplimiento forzado.
La norma que regula la materia es la del artculo 1553 del Cdigo Civil, de acuerdo al
cual, si la obligacin es de hacer y el deudor se constituye en mora, podr pedir el
acreedor, junto con la indemnizacin de la mora, cualquiera de estas tres cosas, a
eleccin suya: 1. Que se apremie al deudor para la ejecucin del hecho convenido: 2.
Que se le autorice a l mismo para hacerlo ejecutar por un tercero a expensas del deudor;
3. Que el deudor le indemnice los perjuicios resultantes de la infraccin del contrato.
Del tenor literal del precepto se desprende que el acreedor de la obligacin de hacer
incumplida tiene una doble opcin: a) ostenta siempre derecho a la indemnizacin de los
perjuicios moratorios, esto es, a la que le corresponde por la no ejecucin oportuna del
hecho y, b) en cuanto a la obligacin misma no cumplida, tiene optativamente un triple
derecho: a) que se apremie al deudor para que cumpla, b) que se le autorice para hacer
ejecutar la obra por un tercero a costa del deudor, o 3 ) que se le indemnicen los
perjuicios compensatorios.
Ahora bien, para ejercer cualquiera de estos derechos es previo que el deudor de la
obligacin de hacer haya sido constituido en mora.
QUINTO: Que en cuanto al derecho que confiere el N 3 del artculo 1553, ste
evidentemente se est refiriendo a la indemnizacin compensatoria, pues el enunciado de
la norma deja a salvo siempre el derecho pedir se le indemnicen los perjuicios moratorios.
Ambas indemnizaciones reemplazan en el patrimonio del acreedor lo que habra
significado econmicamente el cumplimiento fiel de la obligacin. Ahora bien, el acreedor
puede solicitar la indemnizacin compensatoria aun cuando fuere posible el cumplimiento
forzado por naturaleza, ya que el precepto en estudio lo deja a su opcin. En efecto, la
frase de que se sirve la norma -cualquiera de estas tres cosas, a eleccin suya- da
claramente a entender que la indemnizacin de perjuicios es concebible como solicitud
autnoma, sin necesidad de ir aparejada a la peticin de cumplimiento o de resolucin del
contrato de que esa obligacin de hacer incumplida eman.
581
Esta interpretacin se ajusta a los principios que integran el Cdigo Civil, por cuanto no se
observan las particulares motivaciones que podran inducir a privar a los afectados de
dirigir las acciones en la forma y del modo como mejor se ajusten a sus intereses, desde
el momento que el derecho civil otorga a las personas el principio de libre disposicin de
sus bienes y autonoma de la voluntad, todo lo cual lleva a reconocer las mayores
prerrogativas al momento de someter las pretensiones al rgano jurisdiccional. Es por lo
anterior que esta Corte Suprema ha reconocido de manera reiterada la independencia y
autonoma de las acciones indemnizatorias, sean estas moratorias o perentorias, las que
cualquiera sea la naturaleza del objeto de la prestacin, puede impetrarse en forma
exclusiva, desde el momento que el legislador ha establecido su procedencia y la forma
ms usual de interposicin, pero no ha prohibido la que en mejor forma repare
integralmente el dao derivado del incumplimiento.
SEXTO: Que en razn de lo antes dicho, la accin deducida por la sociedad demandante
reconvencional resultaba jurdicamente procedente y al ser notificada a la parte
demandada, cabe afirmar, como acertadamente lo establecieron los jueces del grado, que
la constituy a sta en mora, de conformidad con la regla del N 3 del artculo 1551 del
Cdigo Civil. De este modo, aparece que la decisin impugnada no incurri en el error de
derecho que se le atribuye en el recurso.
SEPTIMO: Que en cuanto a la vulneracin del artculo 160 del Cdigo de Comercio, cabe
tener presente que dicha norma alude a la falta de reclamacin de la factura dentro del
plazo de ocho das y se refiere ms bien a que dicho instrumento se haya extendido de
acuerdo al servicio y precio contratado, lo que no impide deducir las acciones
correspondientes por el incumplimiento de las obligaciones de quien presta el servicio,
ms an si en la especie, se constat el estado de la fruta despus de embarcada y una
vez que lleg al puerto de destino.
En concepto de esta Corte no resulta vulnerada dicha norma, toda vez que nos
encontramos frente a una accin que pretende se declare la obligacin de la demandada
reconvencional de indemnizar perjuicios, como consecuencia de un incumplimiento de
una obligacin contractual, materias que se encuentran regladas por el derecho comn
estatuido en las disposiciones pertinentes contenidas en el Cdigo Civil, siendo por ello
improcedente la aplicacin de normativa especial establecida por el legislador con fines
distintos a los referidos y que dicen relacin con el reclamo sobre el contenido de la
factura.
582
Por otra parte, en tanto la sentencia objeto del recurso ha tenido por probado el
incumplimiento defectuoso del servicio prestado por el demandado reconvencional, no
resulta posible a esta Corte de Casacin arribar a la conclusin que pretende la
recurrente, esto es, que la demandante principal ha cumplido la obligacin que le impuso
el contrato, en tanto no se ha denunciado, la vulneracin de las normas reguladoras de la
prueba.
Por estas consideraciones y lo dispuesto en los artculo 764 y 767 del Cdigo de
Procedimiento Civil, se rechaza el recurso de casacin en el fondo interpuesto en lo
principal de fojas 658, por el abogado Leonardo Garetto Gumera, en representacin de la
demandante, en contra de la sentencia de veintids de enero de dos mil ocho, escrita a
fojas 649 y rectificada a fojas 657.
583
N 2208-08. Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sr.
Sergio Muoz G., Sra. Margarita Herreros M., Sres. Juan Araya E. y Guillermo Silva G. y
Abogada Integrante Sra. Maricruz Gmez de la Torre V.
584
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Clusula de Aceleracin.
C. Suprema
3., 4. y 5.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
Tercero: Que no ha sido materia de discusin en autos el contenido de la clusula de
aceleracin comprendida en el ttulo ejecutivo, la cual se encuentra redactada en los
siguientes trminos: "El no pago oportuno de una cualquiera de las cuotas de capital e
inters, dar derecho al acreedor a hacer exigible de inmediato y anticipadamente el
monto total del saldo insoluto adeudado a esa fecha, el que desde esa misma fecha se
considerar de plazo vencido y devengar a favor del acreedor o de quien sus derechos
represente, el inters mximo convencional que rija durante la mora o simple retardo."
Quinto: Que el artculo 2514 del Cdigo Civil, dispone: "La prescripcin que extingue las
acciones y derechos ajenos exige solamente cierto lapso de tiempo durante el cual no se
hayan ejercido dichas acciones. Se cuenta este tiempo desde que la obligacin se haya
hecho exigible". Por su parte el artculo 98 de la Ley 18.092 precepta que el plazo de
prescripcin de las acciones cambiarias, que incluye al pagar por indicacin expresa del
artculo 107 de la ley aludida, es de un ao contado desde el da del vencimiento del
documento, hecho que evidentemente se va a producir en el caso del pago en cuotas
"cuando se haya pactado clusula de aceleracin - por la mora en la solucin de una de
ellas.
REGLA .
a.- La "clusula de aceleracin" contenida en el ttulo, tiene como finalidad hacer exigible
el total de una deuda como si estuviera vencida no obstante existir plazos pendientes, por
el no pago, retardo o mora en el pago de una o ms de las cuotas en que se encuentre
dividido el servicio de la obligacin.
Esta modalidad de anticipar el vencimiento de la obligacin, fija el tiempo inicial desde el
cual debe contarse el plazo de prescripcin. Ahora bien, la aludida clusula puede
586
b.- La clusula de aceleracin segn la cual "El no pago oportuno de una cualquiera de
las cuotas de capital e inters, dar derecho al acreedor a hacer exigible de inmediato y
anticipadamente el monto total del saldo insoluto adeudado a esa fecha, el que desde esa
misma fecha se considerar de plazo vencido y devengar a favor del acreedor o de
quien sus derechos represente, el inters mximo convencional que rija durante la mora o
simple retardo" tiene carcter imperativo y, en consecuencia, desde la fecha del
incumplimiento, el acreedor podr accionar y hacer exigible el total de la obligacin al
deudor comenzando a correr el plazo de prescripcin extintiva.
4. CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 30 Septiembre 2009. M.J. N 21982
Corte Suprema
Fallo:
Vistos:
En estos autos rol N19.631-2006 seguidos ante el Dcimo Juzgado Civil de Santiago,
sobre juicio ejecutivo, caratulado "Banco de Crdito e Inversiones con Constructora
587
Landexte Limitada", la jueza titular de dicho tribunal por sentencia de cuatro de diciembre
de dos mil siete, acogi la excepcin de prescripcin opuesta a la ejecucin slo respecto
de las cuotas pactadas con vencimiento al 29 de marzo, 29 de abril y 29 de mayo, todas
del ao 2006 y orden continuar adelante la ejecucin respecto de las restantes cuotas
adeudadas, cuyo pago se demanda.
La sociedad ejecutada interpuso recurso de apelacin en contra de dicho fallo y una Sala
de la Corte de Apelaciones de Santiago, por resolucin de veintinueve de agosto de dos
mil ocho, escrita a fojas 58, lo confirm.
Considerando:
Primero: Que los recurrentes denuncian la infraccin a los artculos 98, 102, 103, 105,
107 de la ley 18.092; 1494 y 2514 del Cdigo Civil.
588
Segundo: Que para una acertada resolucin del recurso resulta conveniente dejar
constancia de los siguientes antecedentes del proceso:
Afirma que el deudor no pag la cuota que venca el 29 de marzo de dos mil seis, motivo
por el cual adeuda la cantidad de $ 14.094.952.
Aade que la sociedad Inmobiliaria Landetxe Limitada, don Homero Novoa Miguel, don
Adrian Caussade Maggio y don Jean Caussade Larran se constituyeron en avales y
codeudores solidarios de la sociedad demandada, segn consta en el mismo pagar.
slo en cuanto declar prescritas las cuotas con vencimiento al 29 de marzo, 29 de abril y
29 de mayo de 2006 y orden seguir adelante con la ejecucin respecto de las restantes
cuotas adeudadas.
Quinto: Que el artculo 2514 del Cdigo Civil, dispone: "La prescripcin que extingue las
acciones y derechos ajenos exige solamente cierto lapso de tiempo durante el cual no se
hayan ejercido dichas acciones. Se cuenta este tiempo desde que la obligacin se haya
hecho exigible". Por su parte el artculo 98 de la Ley 18.092 precepta que el plazo de
590
prescripcin de las acciones cambiarias, que incluye al pagar por indicacin expresa del
artculo 107 de la ley aludida, es de un ao contado desde el da del vencimiento del
documento, hecho que evidentemente se va a producir en el caso del pago en cuotas
"cuando se haya pactado clusula de aceleracin - por la mora en la solucin de una de
ellas.
Sexto: Que estas argumentaciones son bastantes para fundar la infraccin de ley que
denuncian los recurrentes, para lo cual se tiene en consideracin, adems, que es un
punto pacfico y no controvertido, que el ejecutado dej de pagar la cuota que venca el 29
de marzo de 2006 y de ah en adelante, por lo que, atendidos los trminos imperativos y
obligatorios de la clusula de aceleracin pactada, el retardo se produjo a partir de dicha
fecha, oportunidad desde la cual corresponde computar el plazo de prescripcin, el que
transcurri en exceso al 26 de junio de 2007, poca en que se notific la demanda,
motivos stos por los cuales proceda acoger la excepcin deducida.
1 Que el inciso segundo del artculo 105 de la ley N 18.092 precepta que el pagar
puede tener tambin vencimientos sucesivos, y en tal caso, para que el no pago de unas
de las cuotas haga exigible el monto total insoluto, es necesario que as se exprese en el
documento. Esta norma, est relacionado con uno de los requisitos que debe contener
este ttulo de crdito, cual es la poca del pago, segn lo dispone el N 3 del artculo 102
de la aludida ley. De este modo, la excepcionalidad prevista por la primera norma, est
591
relacionada nicamente con el plazo fijado para la solucin del crdito y en el solo evento
de que se haya pactado su pago en cuotas, las que, como seala el inciso final del mismo
artculo 105, sin este pacto, cada parcialidad morosa ser protestada separadamente. En
sntesis, el sentido de la clusula de aceleracin es hacer exigible una obligacin que se
paga en cuotas, por el slo hecho de la mora de una de ellas, como si todo el crdito
fuere exigible, aunque no se haya producido la mora de las restantes parcialidades y este
es el derecho que le asiste al acreedor, el de poder cobrar un total o un saldo insoluto de
una obligacin, en el solo evento de la mora de una de las cuotas en que se dividi el
crdito, cualquiera sea el sentido facultativo o imperativo en que se haya redactado la
clusula en discusin;
2 Que por otra parte, la redaccin del artculo 98 de la ley N 18.092 confirma la
aseveracin contenida en el fundamento anterior, puesto que esta norma establece que el
plazo de prescripcin de las acciones cambiarias que incluye al pagar por indicacin
expresa del artculo 107 de la ley aludida es de un ao contado desde el da del
vencimiento del documento, hecho que evidentemente se va a producir en el caso del
pago en cuotas, p or la mora de una de ellas cuando se haya pactado clusula de
aceleracin;
Regstrese.
Rol N 7098-08.
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sres. Milton Juica
A., Sergio Muoz G., Sra. Margarita Herreros M., Sres. Juan Araya E. y Guillermo Silva
592
G.
No firma el Ministro Sr. Juica, no obstante haber concurrido a la vista del recurso y
acuerdo del fallo, por estar con feriado legal.
SENTENCIA DE REEMPLAZO
Vistos:
Lo expresado en los motivos tercero a sexto del fallo de casacin que antecede y
considerando que el deudor ejecutado dej de pagar la cuota vencida el 29 de marzo de
2006 y de ah en adelante las restantes, por lo que, atendidos los trminos imperativos y
obligatorios de la clusula de aceleracin pactada, el retardo se produjo a partir de dicha
fecha, poca desde la cual corresponde computar el plazo de prescripcin, el que
transcurri en exceso al 26 de junio de 2007, oportunidad en que se notific la demanda.
Se previene que los ministros seores Juica y Araya estuvieron por concurrir a la
revocacin del fallo de primer grado en la forma dicha pero teniendo para ello nicamente
en consideracin los fundamentos esgrimidos en la prevencin contenida en la sentencia
de casacin.
N 7098-08.-
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sres. Milton Juica
A., Sergio Muoz G., Sra. Margarita Herreros M., Sres. Juan Araya E. y Guillermo Silva
G.
Autorizado por la Secretaria Sra. Rosa Mara Pinto Egusquiza.
594
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Clusula de Aceleracin
C. Suprema
8.,9.,10.,11. y 12.
Clusula de Aceleracin
C. Suprema
Prevencin
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
SEPTIMO: Que establecida la inexistencia de infraccin de leyes reguladoras de la
prueba, resulta indispensable manifestar que las partes se encuentran contestes, sin que
595
UNDECIMO: Que el artculo 2514 del Cdigo Civil, dispone: "La prescripcin que extingue
las acciones y derechos ajenos exige solamente cierto lapso de tiempo durante el cual no
se hayan ejercido dichas acciones. Se cuenta este tiempo desde que la obligacin se
haya hecho exigible".
Por su parte el artculo 98 de la Ley 18.092 establece que el plazo de prescripcin de las
acciones cambiarias, que incluye al pagar por indicacin expresa del artculo 107 de la
ley aludida, es de un ao contado desde el da del vencimiento del documento, hecho que
evidentemente se va a producir en el caso del pago en cuotas -en el evento de haberse
596
El efecto que deriva de la aplicacin de la clusula es lo que sta misma dijere: permitir al
banco acreedor exigir de inmediato el pago total de lo adeudado, capitalizando los
intereses devengados hasta la fecha y con posterioridad;
597
PREVENCIN
Se previene que el Ministro Sr. Araya concurre al acogimiento del recurso de casacin en
el fondo, teniendo para ello nicamente presente: 1.- Que el inciso segundo del artculo
105 de la Ley 18.092 precepta que el pagar puede tener tambin vencimientos
sucesivos y, en tal caso, para que el no pago de unas de las cuotas haga exigible el
monto total insoluto, es necesario que as se exprese en el documento. Esta norma, est
relacionada con uno de los requisitos que debe contener este ttulo de crdito, cual es la
poca del pago, segn lo dispone el N 3 del artculo 102 de la aludida ley. De este modo,
la excepcionalidad prevista por la primera norma, est relacionada nicamente con el
plazo fijado para la solucin del crdito y en el solo evento de que se haya pactado su
pago en cuotas, las que, como seala el inciso final del mismo artculo 105, sin este
pacto, cada parcialidad morosa ser protestada separadamente. En sntesis, el sentido de
la clusula de aceleracin es hacer exigible una obligacin que se paga en cuotas, por el
solo hecho de la mora de una de ellas, como si todo el crdito fuere exigible, aunque no
se haya producido la mora de las restantes parcialidades y este es el derecho que le
asiste al acreedor, el de poder cobrar un total o un saldo insoluto de una obligacin, en el
solo evento de la mora de una de las cuotas en que se dividi el crdito, cualquiera sea el
sentido facultativo o imperativo en que se haya redactado la clusula en discusin;
REGLA .
a.- La llamada clusula de aceleracin puede ser establecida utilizando mecanismos
verbales imperativos o facultativos, de manera que en el primer caso, verificado el hecho
del retardo o la mora, la obligacin se har ntegramente exigible independientemente que
el acreedor manifieste su voluntad en orden a ejercer el derecho que le confiere la
estipulacin y, en el segundo, esa total exigibilidad depender del hecho que le titular de
la acreencia exprese su intencin de acelerar el crdito.
b.- La clusula segn la cual "La mora o simple retardo en el pago de cualesquiera de las
cuotas de este pagar, facultar al Banco para exigir de inmediato el pago del total de lo
adeudado, el que en ese evento, se considerar de plazo vencido para todos los efectos
legales, capitalizndose los intereses devengados hasta esa fecha y devengando desde
ese momento la obligacin el mismo inters penal sealado en el prrafo anterior" por su
terminologa y naturaleza jurdica de caducidad convencional del plazo, tiene carcter
imperativo, de lo cual se deduce la consecuencia innegable que desde la fecha del
incumplimiento, el plazo ya no ser impedimento para que el acreedor pueda accionar, ya
que es exigible la obligacin y se le permite perseguir al deudor desde esa fecha, por lo
598
4. CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 01 Octubre 2009. M.J. N 21654
Corte Suprema
Fallo:
VISTO:
599
Funda su demanda sealando que el Banco es tenedor y dueo del pagar a plazo N
753-0100153-3, suscrito por los deudores con fecha 23 de enero de 2002, por la cantidad
de $2.000.000 ms un inters del 1,60% mensual, el cual deba ser pagado en cuarenta y
seis cuotas mensuales, por los montos y en las fechas de vencimiento que se indican en
el anexo del documento, a contar del 15 de abril de 2002.
Expresa que el deudor no pago la cuota que venci el 15 de marzo de 2004, adeudando a
la fecha de presentacin de la demanda -19 de abril de 2005-, la cantidad de S1.215.859,
ms los intereses pactados y penales devengados y por devengar hasta el da del pago
efectivo y la comisin legal del Fondo de Garanta para Pequeos Empresarios. Agrega
que el pagar contiene una clusula de aceleracin que establece que la mora o simple
retardo en el pago de cualesquiera de las cuotas, facultar al banco para exigir de
inmediato el pago del total de lo adeudado, el que en ese evento, se considerar de plazo
vencido para todos los efectos legales, capitalizndose los intereses devengados hasta
esa fecha y devengando desde ese momento la obligacin un inters penal acordado en
el mismo instrumento, manifestando que en razn de la mora en el pago del dividendo
correspondiente al mes de marzo de 2004, el banco viene en hacer exigible el total de lo
adeudado.
Expone que las firmas estampadas en el documento fueron autorizadas ante Notario
Pblico y aade que la deuda es lquida, actualmente exigible y que la accin no se
encuentra prescrita.
600
En contra de esta ltima decisin la aludida parte dedujo recurso de casacin en el fondo.
CONSIDERANDO:
PRIMERO: Que el recurrente sostiene que la sentencia de segundo grado que confirm el
fallo de primera instancia que, a su vez, rechaz la excepcin de prescripcin opuesta a la
demanda ejecutiva de autos, ha sido dictada con infraccin a los artculos 1442, 1713,
2381 N 3 del Cdigo Civil; 46, 98, 105 inciso segundo, 106, 107 de la Ley 18.092 y 471
del Cdigo de Procedimiento Civil, segn pasa a explicar: Reitera, en resumen, que la
aceleracin de la deuda se produjo en la especie en el momento en que el deudor
principal se constituy en mora, esto es, en el mes de marzo de 2004 y que entre esa
poca y la fecha en que se le practic el respectivo requerimiento de pago, el 25 de julio
de 2005, transcurri en exceso el plazo de prescripcin de la accin cambiaria previsto en
el artculo 98 de la Ley 18.092, haciendo presente, adems, que de una correcta lectura
de la estipulacin contenida en el propio pagar no puede sino colegirse lo anteriormente
concluido.
601
SEGUNDO: Que para una adecuada inteligencia del asunto y resolucin del recurso de
casacin en el fondo interpuesto, cabe tener presente las siguientes circunstancias del
proceso, que se dieron por establecidas por los jueces de la instancia:
1.- Que el deudor principal, don Luis Jilberto Tamayo Romero, ces en el pago de las
cuotas en que fue subdividida la obligacin contrada con ocasin de la suscripcin el 23
de enero de 2002 del pagar N 753-0100153-3, a contar del vencimiento de la cuota que
debi ser satisfecha el 15 de marzo de 2004.
TERCERO: Que la sentencia recurrida, que reprodujo y confirm el fallo de primer grado
rechazando, en definitiva, la excepcin de prescripcin opuesta a la demanda de autos,
reflexiona al efecto que ""en el pagare N 753-0100153-3, se pact una clusula de
aceleracin de la deuda la que se encuentra redactada en trminos facultativos para el
acreedor, pues ella seala textualmente que: "el simple retardo y/o mora en el pago
ntegro y oportuno del capital y/o de los intereses de la obligacin en la poca pactada
para ello, dar derecho al Banco del Desarrollo para exigir sin mas tramite el pago total"",
por lo que se requiere de la manifestacin de voluntad del acreedor en orden a hacer
exigible el total adeudado, voluntad que slo se ha producido desde el da en que la
demanda ejecutiva se present a distribucin en la I. Corte de Apelaciones, esto es, el 19
de abril de 2005, puesto que es en esa fecha en que el acreedor manifest su voluntad de
acelerar la deuda y no desde el da en que el deudor incurri en el retardo de la cuota con
vencimiento el da 15 de marzo de 2004, ello en razn de que an pendiente las cuotas
602
que restan del pagar, no empieza a correr plazo de prescripcin alguno contra el
acreedor"";
QUINTO: Que para un adecuado anlisis de los errores de derecho denunciados por el
recurrente, debe en primer lugar consignarse que las infracciones de las leyes
reguladoras de la prueba, como lo ha reconocido reiteradamente esta Corte, se entienden
vulneradas, fundamentalmente, cuando los sentenciadores invierten el onus probandi,
rechazan las pruebas que la ley admite, aceptan las que la ley rechaza, desconocen el
valor probatorio de las que se produjeron en el proceso cuando la ley le asigna uno
determinado de carcter obligatorio o alteran el orden de precedencia que la ley le diere.
vinculado con un asunto por el cual no se ha fundado la oposicin y que no fue deducida
como excepcin o defensa por parte de la ejecutada;
UNDECIMO: Que el artculo 2514 del Cdigo Civil, dispone: "La prescripcin que extingue
las acciones y derechos ajenos exige solamente cierto lapso de tiempo durante el cual no
se hayan ejercido dichas acciones. Se cuenta este tiempo desde que la obligacin se
haya hecho exigible".
Por su parte el artculo 98 de la Ley 18.092 establece que el plazo de prescripcin de las
acciones cambiarias, que incluye al pagar por indicacin expresa del artculo 107 de la
ley aludida, es de un ao contado desde el da del vencimiento del documento, hecho que
evidentemente se va a producir en el caso del pago en cuotas -en el evento de haberse
pactado una clusula de aceleracin de naturaleza imperativa-, por la mora en la solucin
de una de ellas.
El efecto que deriva de la aplicacin de la clusula es lo que sta misma dijere: permitir al
banco acreedor exigir de inmediato el pago total de lo adeudado, capitalizando los
intereses devengados hasta la fecha y con posterioridad;
605
Se previene que el Ministro Sr. Araya concurre al acogimiento del recurso de casacin en
el fondo, teniendo para ello nicamente presente: 1.- Que el inciso segundo del artculo
105 de la Ley 18.092 precepta que el pagar puede tener tambin vencimientos
sucesivos y, en tal caso, para que el no pago de unas de las cuotas haga exigible el
606
monto total insoluto, es necesario que as se exprese en el documento. Esta norma, est
relacionada con uno de los requisitos que debe contener este ttulo de crdito, cual es la
poca del pago, segn lo dispone el N 3 del artculo 102 de la aludida ley. De este modo,
la excepcionalidad prevista por la primera norma, est relacionada nicamente con el
plazo fijado para la solucin del crdito y en el solo evento de que se haya pactado su
pago en cuotas, las que, como seala el inciso final del mismo artculo 105, sin este
pacto, cada parcialidad morosa ser protestada separadamente. En sntesis, el sentido de
la clusula de aceleracin es hacer exigible una obligacin que se paga en cuotas, por el
solo hecho de la mora de una de ellas, como si todo el crdito fuere exigible, aunque no
se haya producido la mora de las restantes parcialidades y este es el derecho que le
asiste al acreedor, el de poder cobrar un total o un saldo insoluto de una obligacin, en el
solo evento de la mora de una de las cuotas en que se dividi el crdito, cualquiera sea el
sentido facultativo o imperativo en que se haya redactado la clusula en discusin;
2.- Que por otra parte, la redaccin del artculo 98 de la Ley 18.092 confirma la
aseveracin contenida en el fundamento anterior, puesto que esta norma establece que el
plazo de prescripcin de las acciones cambiarias y que incluye al pagar por indicacin
expresa del artculo 107 de la ley aludida, es de un ao contado desde el da del
vencimiento del d ocumento, hecho que evidentemente se va a producir en el caso del
pago en cuot as, por la mora de una de ellas cuando se haya pactado clusula de
aceleracin;
3.- Que estando demostrado en el presente caso, que la exigibilidad de la obligacin que
se demanda se produjo el 15 de marzo de 2004 y, por ende, provoc el vencimiento del
documento, al notificarse a la demandada con fecha 22 de julio de 2005, resulta evidente
que la accin ejecutiva proveniente del pagar que se cobra en estos autos se hallaba
extinguida, por el transcurso del ao que contempla el artculo 98 de la Ley 18.092 y, en
esta situacin, la sentencia recurrida al rechazar la excepcin de prescripcin opuesta a la
ejecucin ha incurrido en el error de derecho que se le imputa y, por ende, procede que el
arbitrio interpuesto sea acogido.
Regstrese.
Redaccin a cargo del Ministro Sr. Sergio Muoz Gajardo y de la prevencin su autor.
N 5.213-08.-
607
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sres. Sergio
Muoz G., Juan Araya E. y Guillermo Silva G., Fiscal Judicial Sra. Mnica Maldonado C. y
Abogado Integrante Sr. Guillermo Ruiz P.
VISTO:
Y de conformidad, adems, con lo que disponen los artculos 98, 100, 105 y 107 de la Ley
18.092 y 2514 del Cdigo Civil, se revoca, la sentencia apelada de veinticuatro de octubre
de dos mil cinco, escrita de fojas 33 a 40, en cuanto rechaza la excepcin de prescripcin
de la accin opuesta por la ejecutada; y en su lugar se declara que se la acoge, con
costas y, en consecuencia, se rechaza en todas sus partes la demanda deducida en lo
principal de fojas 3 y se absuelve de la ejecucin a la demandada Administradora y
Comercializadora San Francisco S. A., debiendo alzarse los embargos, en su caso.
608
Se previene que el Ministro Sr. Araya concurre a la revocacin del fallo de primer grado,
pero teniendo para ello nicamente en consideracin los fundamentos esgrimidos en la
prevencin contenida en el fallo de casacin.
Redaccin a cargo del Ministro Sr. Sergio Muoz Gajardo y de la prevencin su autor.
Rol N 5.213-08.-
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sres. Sergio
Muoz G., Juan Araya E. y Guillermo Silva G., Fiscal Judicial Sra. Mnica Maldonado C. y
Abogado Integrante Sr. Guillermo Ruiz P.
609
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Clusula de Aceleracin
C. Suprema
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
Sentencia de Remplazo
5.- Que no fue materia de discusin entre las partes el hecho de que la clusula de
aceleracin contenida en el ttulo ejecutivo de autos dispone que: "El simple retardo y/o
mora en el pago ntegro y oportuno de todo o parte de una de las cuotas en la(s) poca(s)
pactada(s) para ello, dar derecho al Banco de Chile para exigir sin ms trmite el pago
total de la deuda o del saldo a que se halle reducida, considerndose en tal evento la
obligacin como de plazo vencido";
610
9.- Que sobre el particular, el artculo 2514 del Cdigo Civil, dispone: "La prescripcin
que extingue las acciones y derechos ajenos exige solamente cierto lapso de tiempo
durante el cual no se hayan ejercido dichas acciones. Se cuenta este tiempo desde que la
obligacin se haya hecho exigible".
Por su parte el artculo 98 de la Ley 18.092 establece que el plazo de prescripcin de las
acciones cambiarias, que incluye al pagar por indicacin expresa del artculo 107 de la
ley aludida, es de un ao contado desde el da del vencimiento del documento, hecho que
evidentemente se va a producir en el caso del pago en cuotas -en el evento de haberse
pactado una clusula de aceleracin de naturaleza imperativa-, por la mora en la solucin
de una de ellas;
611
REGLA .
a.- La denominada clusula de aceleracin puede extenderse valindose de formas
verbales imperativas o facultativas, de manera que en el primer caso, verificado el hecho
del retardo o la mora, la obligacin se har ntegramente exigible independientemente que
el acreedor manifieste su voluntad en orden a ejercer el derecho que le confiere la
estipulacin y, en el segundo, esa total exigibilidad depender del hecho que el titular de
la acreencia exprese su intencin de acelerar el crdito.
b.- La clusula de aceleracin redactada en los siguientes trminos: "El simple retardo y/o
mora en el pago ntegro y oportuno de todo o parte de una de las cuotas en la(s) poca(s)
pactada(s) para ello, dar derecho al Banco de Chile para exigir sin ms trmite el pago
total de la deuda o del saldo a que se halle reducida, considerndose en tal evento la
obligacin como de plazo vencido"; por su terminologa y naturaleza jurdica de caducidad
convencional del plazo, tiene carcter imperativo, de lo cual se deduce la consecuencia
innegable que desde la fecha del incumplimiento, el plazo ya no ser impedimento para
que el acreedor pueda accionar, ya que es exigible la obligacin y se le permite perseguir
al deudor desde esa fecha, por lo que, adems, comienza a correr el plazo de
prescripcin extintiva.
El sentido de la clusula de aceleracin previamente transcrita es hacer exigible una
obligacin que se paga en cuotas, por el solo hecho de la "mora o retardo en el pago
ntegro y oportuno de todo o parte de una de las cuotas", como si el crdito en su conjunto
fuere exigible, aunque no se haya producido la mora de las restantes parcialidades y este
es el derecho que le asiste al acreedor, el de poder cobrar el total o saldo insoluto de la
obligacin, en el slo evento de la mora o retardo, an parcial, de alguna de las cuotas en
que se dividi el crdito
612
4. CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 01 Octubre 2009. M.J. N 21638
Corte Suprema
Fallo:
VISTO:
En estos autos rol N 1.964-2005, seguidos ante el 3 Juzgado Civil de Via del Mar, juicio
en procedimiento ejecutivo, caratulado "Banco de Chile c/ Santorsa Balsamo, Luigi", don
Adolfo Gariazzo Grunert, mandatario judicial en representacin de Socofin S.A. dedujo
demanda de cobro de pagar en contra de don Luigi Santorsa Balsamo.
Expone que se pact que el simple retardo y/o mora en el pago ntegro y oportuno de todo
o parte de una de las cuotas en la poca pactada para ello, dara derecho al Banco para
exigir sin ms trmite como si fuera de plazo vencido el total de la obligacin que
estuviera pendiente, la cual devengara desde el da de la mora o simple retardo y hasta
el de su completo y efectivo pago, el inters mximo convencional que la ley permita
estipular para operaciones de crdito en moneda nacional no reajustables, pero slo si
613
ste fuera superior al inters que se encontrare rigiendo para la obligacin a la fecha de
producirse el simple retardo y/o mora, pues en caso contrario se continuara devengando
ste ltimo. Seala que el deudor no cumpli con su obligacin en la forma convenida,
constituyndose en mora a partir de la cuota que venca el 5 de octubre de 2004,
adeudando la suma de $4.484.558, ms los intereses pactados, penales, comisin legal y
costas.
Indica que la firma del suscriptor se encuentra autorizada ante Notario Pblico, por lo que
el pagar tiene mrito ejecutivo de conformidad a lo dispuesto en el artculo 434 del
Cdigo de Procedimiento Civil.
Solicita por tanto, tener por interpuesta la demanda ejecutiva y ordenar se despache
mandamiento de ejecucin y embargo en contra del ejecutado por la suma de $4.484.558,
ms los intereses pactados, capitalizados segn corresponda de acuerdo a la ley y los
intereses penales correspondientes, hasta hacer entero y cumplido pago de lo adeudado
a su representada, con costas.
614
CONSIDERANDO:
Expresa que el tribunal a quo razon e interpret correctamente el sentido de los referidos
preceptos legales y que precisamente rechaz la excepcin de ineptitud del libelo,
entendiendo que el Banco ejecutante -que es el titular del crdito-, actu en el caso sub
lite a travs de una empresa de cobranza que es su mandataria y que, por tanto, la
individualizacin de la parte ejecutante se realiz acertadamente en el libelo de demanda.
CUARTO: Que el artculo 464 del Cdigo de Procedimiento Civil estatuye que "La
oposicin del ejecutado slo ser admisible cuando se funde en alguna de las
excepciones siguientes:"4. La ineptitud del libelo por falta de algn requisito legal en el
modo de formular la demanda, en conformidad a lo dispuesto en el artculo 254".
Por su parte el artculo 254 del mismo estatuto legal expresa que "La demanda debe
contener:"2. El nombre, domicilio y profesin u oficio del demandante y de las personas
que lo representen, y la naturaleza de la representacin";
616
"Para que proceda la excepcin de ineptitud del libelo es necesario que el requisito legal
ausente de la demanda ejecutiva sea de aquellos que la hagan inepta, o sea, mal
formulada, ininteligible o vaga respecto de las personas o de la causa de pedir o de la
cosa pedida" (C. Valdivia, 19 de julio de 1914, G. 1914, mayo-junio, 2 sem., N 273, pg.
752).
"Cuando la sentencia dictada por el juez de la instancia expresa que la demanda ejecutiva
contiene una exposicin suficientemente clara de los hechos en que ella se apoya y que
las omisiones que el demandado reclama no hacen ininteligible ni vaga la exposicin de
los hechos, se est calificando la accin de acuerdo con los hechos que las partes
exponen, materia que corresponde al juez del fondo, de manera que si ste declara
satisfactoria la exposicin, no cabe sostener que no deba admitirse a tramitacin la
demanda" (C. Suprema, 26 de enero de 1970. R., t. 67, sec. 1, pg 50);
El Banco de Chile es dueo del pagar que se acompaa, suscrito por don Luigi Santorsa
Ba lsamo, ignoro profesin u oficio, con domicilio en Ruta 68, Km. 55, Curacav".
Por su parte, la parte petitoria del aludido libelo seal concretamente: "A US PIDO: Tener
por entablada demanda ejecutiva en contra de don Luigi Santorsa Balsamo, en su calidad
de deudor, ya individualizado, y ordenar se despache mandamiento de ejecucin y
embargo en contra de ellos (sic) por la suma de $4.484.558, ms los intereses pactados,
capitalizados segn corresponda de acuerdo a la ley, ms intereses penales
correspondientes, hasta hacer entero y cumplido pago de lo adeudado a mi representada,
con costas"; par SEPTIMO: Que conforme se colige de la lectura de los prrafos del
escrito anteriormente transcritos, es evidente que la demanda ejecutiva interpuesta en
estos autos es apta, legible y suficientemente clara, respecto de la identidad de las
personas -ejecutante y ejecutado-, causa a pedir y cosa pedida, y que permiti, adems,
al demandado presentar su defensa en forma oportuna e informada, situacin por la cual,
tal como reclama el recurrente, al concluir lo contrario, los sentenciadores de alzada
incurrieron en error de derecho al haber interpretado y aplicado incorrectamente los
artculos 254 N 2 y 464 N 4 del Cdigo de Procedimiento Civil;
617
jurisdiccin no es, como lo fue en los tiempos de la edad media, una facultad potestativa,
sino un deber de las autoridades en las cuales reside. Decir en las leyes, y en el caso de
la naturaleza del presente, que una autoridad puede hacer tal cosa, es decir que debe
hacerla cada vez que se le presenten las condiciones requeridas por la ley para el
ejercicio de semejante atribucin". (Ballesteros (n.1) 1, pg. 539);
Regstrese.
N 6.958-08.-
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sres. Sergio
Muoz G., Juan Araya E. y Guillermo Silva G., Fiscal Judicial Sra. Mnica Maldonado C. y
Abogado Integrante Sr. Guillermo Ruiz P.
VISTO:
que comparece en autos por dicha empresa con la entidad bancaria propietaria del
documento, es menester recordar que la falta de personera es la carencia del vnculo
jurdico que habilita para actuar en juicio a nombre y en representacin de otro y que la
falta de representacin es la ausencia de la relacin jurdica de origen legal, judicial o
voluntario, en virtud de la cual una persona, llamada representante, actuando dentro de
los limites de su poder realiza actos a nombre de otra, llamada representado, haciendo
recaer sobre sta los efectos jurdicos emergentes de su gestin;
2.- Que sobre el particular, atendidos los trminos expresos en que el ejecutante
interpuso su demanda ejecutiva -segn se seal en el motivo sexto del fallo de casacin
precedente- y sus exposiciones posteriores, vertidas en el escrito de traslado a las
excepciones y en las alegaciones efectuadas en estrados por el abogado del ejecutante,
de las cuales se colige que dicha parte pretendi, con posterioridad a la demanda, la
existencia de un vnculo jurdico existente entre Socofin S.A. y el Banco de Chile, el cual
se originara en una representacin convencional, segn se discurre, adems, de la
prueba documental allegada por dicha parte a la causa, situacin legal que habra
habilitado al mandatario judicial de la primera institucin para demandar a nombre de la
segunda, es preciso concluir que tal tesis resulta absolutamente inaceptable atendidos los
claros y expresos trminos en que se dedujo la demanda, en la cual se omiti cualquier
afirmacin al respecto, por lo que la mencionada excepcin de carcter dilatorio deber
ser admitida;
3.- Que por su parte, en relacin a la excepcin prevista en el numeral 7 del artculo 464
del Cdigo de Procedimiento Civil, esto es, la falta de alguno de los requisitos o
condiciones establecidos por la ley para que el ttulo tenga fuerza ejecutiva sea
absolutamente, sea en relacin al demandado, cabe desestimar dicha impugnacin en
cuanto se sustenta en la falta de mrito ejecutivo del ttulo por no pago de los tributos que
lo gravan, toda vez que el impuesto que pesa sobre este tipo de instrumentos se paga
conforme establece el artculo 29 del D.L. 3.475 por ingresos mensuales en dinero en
Tesorera.
En relacin con la alegacin de falta de protesto del pagar, es menester considerar que
las partes voluntariamente liberaron al ejecutante de efectuar el protesto, aplicando a su
respecto lo dispuesto en el artculo 74 de la Ley 18.093, situacin por la cual la excepcin
en estudio deber tambin ser rechazada;
proceso: a).- Que el deudor principal, don Luigi Santorsa Balsamo, ces en el pago de las
cuotas en que fue subdividida la obligacin contrada con ocasin de la suscripcin el 19
de diciembre de 2003 del pagar N 30009241, a contar del vencimiento de la cuota de
fecha 5 de octubre de 2004.
5.- Que no fue materia de discusin entre las partes el hecho de que la clusula de
aceleracin contenida en el ttulo ejecutivo de autos dispone que: "El simple retardo y/o
mora en el pago ntegro y oportuno de todo o parte de una de las cuotas en la(s) poca(s)
pactada(s) para ello, dar derecho al Banco de Chile para exigir sin ms trmite el pago
total de la deuda o del saldo a que se halle reducida, considerndose en tal evento la
obligacin como de plazo vencido";
fuere exigible, aunque no se haya producido la mora de las restantes parcialidades y este
es el derecho que le asiste al acreedor, el de poder cobrar el total o saldo insoluto de la
obligacin, en el slo evento de la mora o retardo, an parcial, de alguna de las cuotas en
que se dividi el crdito;
9.- Que sobre el particular, el artculo 2514 del Cdigo Civil, dispone: "La prescripcin
que extingue las acciones y derechos ajenos exige solamente cierto lapso de tiempo
durante el cual no se hayan ejercido dichas acciones. Se cuenta este tiempo desde que la
obligacin se haya hecho exigible".
Por su parte el artculo 98 de la Ley 18.092 establece que el plazo de prescripcin de las
acciones cambiarias, que incluye al pagar por indicacin expresa del artculo 107 de la
ley aludida, es de un ao contado desde el da del vencimiento del documento, hecho que
evidentemente se va a producir en el caso del pago en cuotas -en el evento de haberse
pactado una clusula de aceleracin de naturaleza imperativa-, por la mora en la solucin
de una de ellas;
623
Se previene que el Ministro Sr. Araya concurre a la revocacin del fallo de primer grado,
pero teniendo para ello, en relacin a la excepcin de prescripcin de la accin ejecutiva,
nicamente en consideracin:
1.- Que el inciso segundo del artculo 105 de la Ley 18.092 precepta que el pagar
puede tener tambin vencimientos sucesivos y, en tal caso, para que el no pago de unas
de las cuotas haga exigible el monto total insoluto, es necesario que as se exprese en el
documento. Esta norma, est relacionada con uno de los requisitos que debe contener
este ttulo de crdito, cual es la poca del pago, segn lo dispone el N 3 del artculo 102
de la aludida ley. De este modo, la excepcionalidad prevista por la primera norma, est
relacionada nicamente con el plazo fijado para la solucin del crdito y en el solo evento
de que se haya pactado su pago en cuotas, las que, como seala el inciso final del mismo
artculo 105, sin este pacto, cada parcialidad morosa ser protestada separadamente. En
sntesis, el sentido de la clusula de aceleracin es hacer exigible una obligacin que se
paga en cuotas, por el solo hecho de la mora de una de ellas, como si todo el crdito
fuere exigible, aunque no se haya producido la mora de las restantes parcialidades y este
es el derecho que le asiste al acreedor, el de poder cobrar un total o un saldo insoluto de
una obligacin, en el solo evento de la mora de una de las cuotas en que se dividi el
crdito, cualquiera sea el sentido facultativo o imperativo en que se haya redactado la
clusula en discusin;
2.- Que por otra parte, la redaccin del artculo 98 de la Ley 18.092 confirma la
aseveracin contenida en el fundamento anterior, puesto que esta norma establece que el
plazo de prescripcin de las acciones cambiarias y que incluye al pagar por indicacin
expresa del artculo 107 de la ley aludida, es de un ao contado desde el da del
vencimiento del documento, hecho que evidentemente se va a producir en el caso del
pago en cuotas, por la mora de una de ellas cuando se haya pactado clusula de
aceleracin;
3.- Que estando demostrado en el presente caso, que la exigibilidad de la obligacin que
se demanda se produjo el 5 de octubre de 2004 y, por ende, provoc el vencimiento del
documento, al notificarse al demandado con fecha 30 de mayo de 2006, resulta evidente
624
que la accin ejecutiva proveniente del pagar que se cobra en estos autos se hallaba
extinguida, por el transcurso del ao que contempla el artculo 98 de la Ley 18.092.
Regstrese y devulvase con sus agregados.
Rol N 6.958-08.-
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sres. Sergio
Muoz G., Juan Araya E. y Guillermo Silva G., Fiscal Judicial Sra. Mnica Maldonado C. y
Abogado Integrante Sr. Guillermo Ruiz P.
625
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Clusula de Aceleracin.
C. Suprema
Clusula de Aceleracin.
C.
Suprema 1., 2. y 3.
(Prevensin)
OCTAVO: Que el artculo 2514 del Cdigo Civil, dispone: "La prescripcin que extingue
las acciones y derechos ajenos exige solamente cierto lapso de tiempo durante el cual no
se hayan ejercido dichas acciones. Se cuenta este tiempo desde que la obligacin se
haya hecho exigible".
Por su parte el artculo 98 de la Ley 18.092 establece que el plazo de prescripcin de las
acciones cambiarias, que incluye al pagar por indicacin expresa del artculo 107 de la
ley aludida, es de un ao contado desde el da del vencimiento del documento, hecho que
evidentemente se va a producir en el caso del pago en cuotas -en el evento de haberse
pactado una clusula de aceleracin de naturaleza imperativa-, por la mora en la solucin
de una de ellas.
El efecto que deriva de la aplicacin de la clusula es lo que sta misma dijere: permitir al
banco acreedor exigir de inmediato el pago total de lo adeudado, capitalizando los
intereses devengados hasta la fecha y con posterioridad;
Voto disidente
1.- Que el inciso segundo del artculo 105 de la Ley 18.092 precepta que el pagar
puede tener tambin vencimientos sucesivos y, en tal caso, para que el no pago de unas
de las cuotas haga exigible el monto total insoluto, es necesario que as se exprese en el
documento. Esta norma, est relacionada con uno de los requisitos que debe contener
este ttulo de crdito, cual es la poca del pago, segn lo dispone el N 3 del artculo 102
de la aludida ley.
628
2.- Que por otra parte, la redaccin del artculo 98 de la Ley 18.092 confirma la
aseveracin contenida en el fundamento anterior, puesto que esta norma establece que el
plazo de prescripcin de las acciones cambiarias y que incluye al pagar por indicacin
expresa del artculo 107 de la ley aludida, es de un ao contado desde el da del
vencimiento del documento, hecho que evidentemente se va a producir en el caso del
pago en cuotas, por la mora de una de ellas cuando se haya pactado clusula de
aceleracin;
3.- Que estando demostrado en el presente caso, que la exigibilidad de la obligacin que
se demanda se produjo el 10 de agosto de 2003 y, por ende, provoc el vencimiento del
documento, al notificarse a la demandada con fecha 07 de octubre de 2004, resulta
evidente que la accin ejecutiva proveniente del pagar que se cobra en estos autos se
hallaba extinguida, por el transcurso del ao que contempla el artculo 98 de la Ley 18.092
y, en esta situacin, la sentencia recurrida al rechazar la excepcin de prescripcin
opuesta a la ejecucin ha incurrido en el error de derecho que se le imputa y, por ende,
procede que el arbitrio interpuesto sea acogido.
34. REGLA .
a.- La denominada clusula de aceleracin puede extenderse valindose de formas
verbales imperativas o facultativas, de manera que en el primer caso, verificado el hecho
del retardo o la mora, la obligacin se har ntegramente exigible independientemente que
el acreedor manifieste su voluntad en orden a ejercer el derecho que le confiere la
estipulacin y, en el segundo, esa total exigibilidad depender del hecho que el titular de
la acreencia exprese su intencin de acelerar el crdito.
629
b.- El sentido de la clusula segn la cual "El no pago ntegro y oportuno de una o ms
cuotas del presente pagar dar derecho al BBVA Banco Bhif para exigir de inmediato,
como si fuere de plazo vencido, el total de la obligacin que estuviere pendiente es hacer
exigible una obligacin que se paga en cuotas, por el solo hecho de la "mora o retardo en
el pago ntegro y oportuno de todo o parte de una de las cuotas", como si el crdito en su
conjunto fuere exigible, aunque no se haya producido la mora de las restantes
parcialidades y este es el derecho que le asiste al acreedor, el de poder cobrar el total o
saldo insoluto de la obligacin, en el slo evento de la mora o retardo, an parcial, de
alguna de las cuotas en que se dividi el crdito.
Que establecida en los trminos que se reproduce la clusula de aceleracin en el motivo
tercero, la jurisprudencia de esta Primera Sala Civil ha determinado que, por su
terminologa y naturaleza jurdica de caducidad convencional del plazo, tiene carcter
imperativo, de lo cual se deduce la consecuencia innegable que desde la fecha del
incumplimiento, el plazo ya no ser impedimento para que el acreedor pueda accionar, ya
que es exigible la obligacin y se le permite perseguir al deudor desde esa fecha, por lo
que, adems, comienza a correr el plazo de prescripcin extintiva.
Prevencin
Corte Suprema
630
Fallo:
Vistos:
En estos autos Rol N 2511-04, seguidos ante el Tercer Juzgado Civil de Santiago,
procedimiento ejecutivo, caratulado "Banco Bilbao Vizcaya Argentaria con Gerardo Lpez
Ferreiro", doa Mara Ester Paredes Martnez deduce demanda ejecutiva en contra de
don Gerardo Lpez Ferreiro, para que se despache mandamiento de ejecucin y embargo
en su contra por la suma de 880,38 unidades de fomento, equivalentes al 1 de marzo de
2004 a la suma de $ 14.816.892 ms intereses que correspondan, gastos y costas.
Indica en su demanda que con fecha 21 de octubre de 2002, el ejecutado declar adeudar
y se oblig a pagar incondicionalmente a la orden del BBVA Banco Bhif, la suma de
1.034, 45 unidades de fomento, en 47 cuotas mensuales y sucesivas, venciendo la
primera el 10 de enero de 2003 y las restantes los 10 de los meses siguientes.
631
Mediante sentencia de veintisiete de enero de dos mil cinco, escrita a fojas 61, la jueza
titular desestim las excepciones y orden seguir adelante con la ejecucin hasta hacer
entero pago al ejecutante en capital, intereses y costas. Apelada por el ejecutado, una de
las Salas de la Corte de Apelaciones de Santiago, por resolucin de veinticinco de
septiembre de dos mil ocho, la confirm.
Considerando.
Expresa que los jueces confunden que el hecho que constituye la interrupcin del plazo
de prescripcin indicado en el artculo 98 de la Ley 18.092, consiste en el acto de ingresar
la demanda a distribucin en la Corte de Apelaciones y no la notificacin de la demanda
como lo establece el artculo 100 de la citada ley, lo que constituye un error de derecho
por una errnea aplicacin de lo dispuesto en el inciso primero del citado precepto.
SEGUNDO: Que para una adecuada inteligencia del asunto, cabe tener presente las
siguientes circunstancias del proceso:
a) Que la deudora ces en el pago de las cuotas en que fue subdividida la obligacin
contrada con ocasin de la suscripcin del pagar fundante de la ejecucin, a contar de
632
TERCERO: Que la sentencia recurrida, que reprodujo y confirm el fallo de primer grado
rechazando, en definitiva, la excepcin de prescripcin opuesta a la demanda de autos,
reflexiona al efecto que en los trminos en que se redact la clusula de aceleracin,
resulta facultativo para el banco ejecutante hacer exigible el total de la deuda, en el
evento que, como en la especie el ejecutado cese en el pago ntegro y oportuno de una o
ms cuotas a que se oblig, que la manifestacin de hacer exigible el total de lo adeudado
se debe entender efectuada a la poca de presentacin de la demanda a distribucin ante
la Iltma. Corte de Apelaciones de Santiago, esto es, el 22 de abril de 2004, oportunidad en
que se produjo el vencimiento de las cuotas aceleradas y; finalmente que entre la fecha
de presentacin de la demanda y la notificacin de la misma ocurrida el 7 de octubre de
2004, no ha transcurrido el tiempo exigido por la ley para que se produzca la prescripcin
alegada.
633
OCTAVO: Que el artculo 2514 del Cdigo Civil, dispone: "La prescripcin que extingue
las acciones y derechos ajenos exige solamente cierto lapso de tiempo durante el cual no
se hayan ejercido dichas acciones. Se cuenta este tiempo desde que la obligacin se
haya hecho exigible".
Por su parte el artculo 98 de la Ley 18.092 establece que el plazo de prescripcin de las
acciones cambiarias, que incluye al pagar por indicacin expresa del artculo 107 de la
ley aludida, es de un ao contado desde el da del vencimiento del documento, hecho que
evidentemente se va a producir en el caso del pago en cuotas -en el evento de haberse
pactado una clusula de aceleracin de naturaleza imperativa-, por la mora en la solucin
de una de ellas.
El efecto que deriva de la aplicacin de la clusula es lo que sta misma dijere: permitir al
banco acreedor exigir de inmediato el pago total de lo adeudado, capitalizando los
intereses devengados hasta la fecha y con posterioridad;
sentencia de fecha veinticinco de septiembre de dos mil ocho, que se lee a fojas 88, la
que se invalida y se reemplaza por la que se dicta a continuacin, separadamente y sin
nueva vista.
Se previene por los ministros seores Muoz y Silva que de esta manera y por los
razonamientos expresados alteran lo que fue su voto particular en los autos Rol N 390808.
Se previene que el Ministro Sr. Araya concurre al acogimiento del recurso de casacin en
el fondo, teniendo para ello nicamente presente:
1.- Que el inciso segundo del artculo 105 de la Ley 18.092 precepta que el pagar
puede tener tambin vencimientos sucesivos y, en tal caso, para que el no pago de unas
de las cuotas haga exigible el monto total insoluto, es necesario que as se exprese en el
documento. Esta norma, est relacionada con uno de los requisitos que debe contener
este ttulo de crdito, cual es la poca del pago, segn lo dispone el N 3 del artculo 102
de la aludida ley.
2.- Que por otra parte, la redaccin del artculo 98 de la Ley 18.092 confirma la
aseveracin contenida en el fundamento anterior, puesto que esta norma establece que el
plazo de prescripcin de las acciones cambiarias y que incluye al pagar por indicacin
expresa del artculo 107 de la ley aludida, es de un ao contado desde el da del
vencimiento del documento, hecho que evidentemente se va a producir en el caso del
pago en cuotas, por la mora de una de ellas cuando se haya pactado clusula de
aceleracin;
636
3.- Que estando demostrado en el presente caso, que la exigibilidad de la obligacin que
se demanda se produjo el 10 de agosto de 2003 y, por ende, provoc el vencimiento del
documento, al notificarse a la demandada con fecha 07 de octubre de 2004, resulta
evidente que la accin ejecutiva proveniente del pagar que se cobra en estos autos se
hallaba extinguida, por el transcurso del ao que contempla el artculo 98 de la Ley 18.092
y, en esta situacin, la sentencia recurrida al rechazar la excepcin de prescripcin
opuesta a la ejecucin ha incurrido en el error de derecho que se le imputa y, por ende,
procede que el arbitrio interpuesto sea acogido
Regstrese.
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sres. Sergio
Muoz G., Juan Araya E. y Guillermo Silva G. y Abogados Integrantes Sra. Maricruz
Gmez de la Torre V. y Sr. Domingo Hernndez E.
No firman el Ministro Sr. Araya y el Abogado Integrante Sr. Hernndez, no obstante haber
concurrido ambos a la vista del recurso y acuerdo del fallo, por estar con permiso el
primero y ausente el segundo.
VISTOS:
637
Lo expresado en los motivos cuarto a noveno del fallo de casacin que antecede y
considerando que en la especie el deudor principal dej de pagar la cuota vencida el 10
de agosto de 2003 y de ah en adelante las restantes, por lo que, atendidos los trminos
imperativos y obligatorios de la clusula de aceleracin pactada, el retardo se produjo a
partir de dicha fecha, oportunidad desde la cual corresponde en el caso en particular
computar el plazo de prescripcin, el que transcurri en exceso al 07 de octubre de 2004,
da en que se notific la demanda al ejecutado de autos, situacin que, en definitiva,
determina concluir que deber ser acogida la excepcin de prescripcin de la accin
interpuesta por la ejecutada, la que se contempla en el artculo 464 N 17 del Cdigo de
Procedimiento Civil.
Y de conformidad, adems, con lo que disponen los artculos 98, 100, 105 y 107 de la Ley
18.092 y 2514 del Cdigo Civil, 186 y 471 del Cdigo de Procedimiento Civil, se declara:
a) Que se confirma la sentencia apelada de veintisiete de enero de dos mil cinco, escrita
de fojas 61 en cuanto por ella se rechaza la excepcin del numeral 2 del artculo 464 del
Cdigo de Procedimiento Civil;
Se previene que el Ministro Sr. Araya concurre a la revocacin del fallo de primer grado,
pero teniendo para ello nicamente en consideracin los fundamentos esgrimidos en la
prevencin contenida en el fallo de casacin.
638
Rol N 7366-08.-
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sres. Sergio
Muoz G., Juan Araya E. y Guillermo Silva G. y Abogados Integrantes Sra. Maricruz
Gmez de la Torre V. y Sr. Domingo Hernndez E.
639
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Clusula de aceleracin.
C. Suprema
3., 4., 5. y 6.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
Tercero: Que en el documento que sirve de ttulo a la ejecucin y a que se refiere el
recurso, se lee una clusula que, en lo que interesa, es del siguiente tenor: "el no pago
ntegro y oportuno de una o ms cuotas del pagar dar derecho al BBVA Banco BHIF
para exigir de inmediato, como si fuere de plazo vencido, el total de la obligacin que
estuviere pendiente".
consiste en hacer exigible el total de una deuda como si estuviera vencida, no obstante
existir plazos pendientes, en razn del retardo o mora en el pago de una o ms de las
cuotas en que se encuentre dividido el servicio de la obligacin. Esta modalidad de
anticipar el vencimiento de la deuda fija, por consiguiente, el tiempo inicial desde el cual
debe computarse el plazo de prescripcin.
Dicho de otro modo, en la aludida clusula se previ que por la sola circunstancia de
retardarse el pago de cualquiera de las cuotas la deuda debe considerarse como si fuese
de plazo vencido, esto es, que el vencimiento o caducidad del plazo se produce por el
solo hecho que el deudor no pague una cuota de la deuda en el trmino previsto, de
manera tal que la caducidad del plazo no depende, entonces como resulta claro del
tenor literal de la estipulacin de ninguna manifestacin de voluntad del banco acreedor,
sino de la sola llegada del trmino all previsto, sin haberse efectuado el pago por parte
del deudor.
La conclusin anterior es, en este caso, compartida plenamente incluso por quienes no
adscriben al criterio que atiende a los trminos en que dicha clusula fue establecida, toda
vez que para los seguidores de esta corriente la exigibilidad de la obligacin se producir
siempre y a todo evento, en el caso del pago en cuotas, por la mora de una de ellas.
641
Sexto: Que el artculo 2514 del Cdigo Civil dispone que la prescripcin que extingue las
acciones y derechos ajenos exige solamente cierto lapso de tiempo durante el cual no se
hayan ejercido dichas acciones. Se cuenta este tiempo, agrega el inciso 2, desde que la
obligacin se haya hecho exigible. Por su parte, el inciso 1 del artculo 2515 del mismo
texto legal establece que este tiempo es en general de tres aos para las acciones
ejecutivas y de cinco para las ordinarias.
En este contexto, si los sentenciadores han fijado como hecho de la causa que la deudora
se constituy en mora al vencimiento de la sexta cuota, el 6 de enero de 2002, debe
necesariamente concluirse, por una parte, que a partir de esta fecha se devengaron las
cuotas restantes y, con ello, se hizo exigible el total de la obligacin, en virtud de la
aceleracin convenida, y, por otra, que esa misma fecha determina la oportunidad a partir
de la cual comienza a computarse el trmino de prescripcin extintiva, al tenor del inciso
2 del artculo 2514 del Cdigo Civil transcrito ms arriba.
REGLA .
a.- La "clusula de aceleracin" consiste en hacer exigible el total de una deuda como si
estuviera vencida, no obstante existir plazos pendientes, en razn del retardo o mora en el
pago de una o ms de las cuotas en que se encuentre dividido el servicio de la obligacin.
Esta modalidad de anticipar el vencimiento de la deuda fija, por consiguiente, el tiempo
inicial desde el cual debe computarse el plazo de prescripcin.
CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 19 octubre 2009. G.J. N 352, p.83. L.P. N 42870.
Corte Suprema
643
Fallo:
Vistos:
1. El primero por la suma de $ 4.603.670, por concepto de capital, que junto a sus
intereses de 1,68% mensual, deba pagarse en 36 cuotas mensuales y sucesivas, cada
una de ellas por la suma de $ 174.325, excepto la ltima que es por $ 174.318, con
vencimientos a contar del 6 de agosto de 2001.
Seala que el pagar se encuentra en mora de pago desde la cuota con vencimiento el 6
de enero de 2002 inclusive, por lo que estara facultado para exigir el pago de todo el
saldo de la obligacin, que por solo concepto de capital asciende a $ 4.171.728,
caducando a contar de la fecha de notificacin de la demanda el plazo establecido para el
pago de la deuda.
644
Finalmente, indica que la firma del suscriptor se encuentra autorizada ante notario, por lo
que los pagars constituyen ttulos ejecutivos, sus acciones no estn prescritas y las
obligaciones son lquidas y actualmente exigibles.
A fojas 35, no se dio lugar a la respuesta de las excepciones, por haber sido presentada
en forma extempornea.
A fojas 36, se recibi la causa a prueba, rindindose la documental que consta en autos.
Considerando:
645
Segundo: Que, el ejecutante no respondi la excepcin referida dentro del trmino que
tena para hacerlo.
Tercero: Que, del anlisis del primer pagar, consta que la fecha del primer vencimiento
impago fue el da 6 de agosto de 2001, fecha desde la cual debe contarse el plazo de un
ao de prescripcin establecido en la ley N 18.092. Que la notificacin de la demanda y
el requerimiento de pago fueron efectuados los das 28 y 30 de junio de 2003,
respectivamente, esto es, ms de un ao despus que el pagar se hiciera exigible, razn
por la que procede acoger la excepcin referida por este pagar.
Sexto: Que, en nada altera lo concluido las dems alegaciones formuladas por las partes
en este proceso.
Por estas consideraciones y visto, adems, lo dispuesto en los artculos 140, 160, 170,
254, 434 N 4, 464 Ns. 9, 17 y 471 del Cdigo de Procedimiento Civil; 1437, 1545, 1698,
2492 y 2515 del Cdigo Civil; y ley
N 18.092, se declara:
Rol 1.5262003.
Vistos:
1. Que consta en autos que doa Mara Ins del Carmen Illanes Riveros, con fecha 14 de
junio de 2001, suscribi un pagar en favor del BBVA Banco BHIF, por la suma de $
4.603.670, pagadero en 36 cuotas mensuales y sucesivas, con vencimiento la primera de
ellas, el 6 de agosto de 2001, estipulndose en el citado documento que el no pago
ntegro y oportuno de una o ms cuotas del pagar dar derecho al Banco para exigir de
inmediato, como si fuere de plazo vencido, el total de la obligacin que estuviere
pendiente.
647
6. Que, desde luego, la clusula de aceleracin no puede ser utilizada para extender o
revivir el plazo de prescripcin que hubiere operado respecto de aquellas cuotas que
vencieron conforme al plazo originalmente convenido para su pago, ya que si bien el
acreedor est facultado para hacer exigible el total de la obligacin cuando estime
conveniente y no necesariamente cuando el deudor caiga en mora en el pago de una
cuota determinada, no puede pretender dotar a la clusula de un efecto jurdico distinto al
que posee y que no es otro que el de acarrear la caducidad convencional del plazo, esto
es, adelantar la exigibilidad del trmino inicialmente convenido, transformando la
obligacin que an se encontraba sujeta a plazo, en una pura y simple.
648
Por estos fundamentos, disposiciones legales citadas y lo dispuesto en los artculos 107
de la ley N 18.902 y 186 y siguientes del Cdigo Civil, se revoca la sentencia. de quince
de junio de dos mil cuatro, escrita a fojas 49, en cuanto acoge ntegramente la excepcin
de prescripcin opuesta a fojas 9 y, en su lugar, se declara que se la acoge slo con
respecto a las cuotas que vencieron entre el 6 de enero y el 6 de junio de 2002, debiendo
darse curso a la ejecucin con respecto a las restantes, en los trminos solicitados.
Se previene que la Ministro seora Ravanales estuvo por revocar el fallo en alzada y
rechazar ntegramente la excepcin de prescripcin opuesta respecto del pagar
Segundo: Que en ese contexto, y atenindose nicamente a los hechos en que se hace
consistir la excepcin entablada, no estima la previnente configurada la excepcin de
prescripcin de la accin ejecutiva.
Regstrese y archvese.
Rol N 8.7532004.
649
Pronunciada por la Ministro seora Gloria Ana Chevesich Ruiz e integrada por la Ministro
seora Adelita Ravanales Arriagada y Abogado Integrante seora Andrea Muoz
Snchez.
Vistos:
En estos autos Rol N 1.5262003 del Primer Juzgado Civil de Santiago sobre juicio
ejecutivo de cobro de pagar, caratulados "BBVA Banco BHIF con Illanes Riveros, Mara
Ins del Carmen", por sentencia de quince de junio de dos mil cuatro, escrita a fojas 49, la
seora Juez Titular del referido Tribunal acogi ntegramente la excepcin de prescripcin
opuesta respecto del pagar N 26.545.013575 y la rechaz en relacin al N 82942134.
Apelado este fallo por el ejecutante, una de las Salas de la Corte de Apelaciones de
Santiago, en sentencia de treinta de junio de dos mil ocho, que se lee a fojas 66, lo revoc
en la parte que rechazaba ntegramente la excepcin y declar en su lugar que sta
queda acogida slo en forma parcial respecto de las cuotas del pagar N 26.545.01357
5 devengadas con anterioridad al 6 de junio de 2002, y lo confirm en lo dems.
Considerando:
Argumenta la recurrente que el tenor literal del artculo 2514 del Cdigo Civil es claro y
preciso al sealar que el plazo de prescripcin comienza a computarse desde que la
obligacin se hace exigible.
650
Por otra parte, agrega, en virtud del principio de autonoma de la voluntad las partes
convinieron que el no pago oportuno de una cuota daba derecho al acreedor para exigir el
total de la obligacin, por lo tanto, al presentar el acreedor la demanda ejecutiva por el
total significa que ejerci el derecho que le confera la clusula de aceleracin el da en
que se dej de pagar la cuota que venca el 6 de enero de 2002, fecha en que comenz a
correr el plazo de un ao de prescripcin.
Segundo: Que el fallo objeto del recurso establece que la ejecutada, con fecha 14 de junio
de 2001, suscribi un pagar a favor de la ejecutante por la suma de $4.603.670,
pagadero en treinta y seis cuotas mensuales y sucesivas, con vencimiento la primera el 6
de agosto del mismo ao, estipulndose que el no pago ntegro y oportuno de una o ms
cuotas del documento dar derecho al banco para exigir de inmediato, como si fuera de
plazo vencido, el total de la obligacin que estuviere pendiente.
Conforme se expresa en el pagar, razonan los jueces, las partes convinieron una
clusula de aceleracin que se encuentra redactada en trminos facultativos, por lo que
estando establecida en beneficio del acreedor no basta que el deudor deje de pagar una o
ms cuotas para que se produzca ipso facto la caducidad del plazo y comience a correr la
prescripcin como ocurre en las clusulas imperativas, sino que es necesario, adems,
que el titular del crdito manifieste su voluntad de hacer efectiva la referida clusula,
oportunidad a partir de la cual se hace exigible la obligacin y comienza a correr el plazo
de prescripcin. En la especie, sigue el raciocinio, se entiende que el acreedor ha
exteriorizado su voluntad de hacer uso de la clusula de aceleracin con la presentacin
de la demanda a distribucin en la Corte de Apelaciones, el 15 de abril de 2003, lo que
produjo el efecto de hacer caducar el plazo de aquellas cuotas que a esa fecha se
encontraban pendientes de pago, hacindolas exigibles y comenzando a correr el trmino
651
Desde luego, continan los magistrados, la clusula de aceleracin no puede ser utilizada
para extender o revivir el plazo de prescripcin que hubiere operado respecto de aquellas
cuotas que vencieron conforme al plazo originalmente convenido para su pago, ya que si
bien el acreedor est facultado para hacer exigible el total de la obligacin cuando estime
conveniente y no necesariamente cuando el deudor caiga en mora de una cuota
determinada, no puede pretender dotar a la clusula de un efecto distinto al que posee y
que no es otro que el de acarrear la caducidad convencional del plazo, esto es, adelantar
la exigibilidad del trmino inicialmente estipulado, transformando la obligacin que an se
encontraba sujeta a plazo, en una pura y simple.
Dicho de otro modo, en la aludida clusula se previ que por la sola circunstancia de
retardarse el pago de cualquiera de las cuotas la deuda debe considerarse como si fuese
de plazo vencido, esto es, que el vencimiento o caducidad del plazo se produce por el
solo hecho que el deudor no pague una cuota de la deuda en el trmino previsto, de
manera tal que la caducidad del plazo no depende, entonces como resulta claro del
tenor literal de la estipulacin de ninguna manifestacin de voluntad del banco acreedor,
sino de la sola llegada del trmino all previsto, sin haberse efectuado el pago por parte
del deudor.
La conclusin anterior es, en este caso, compartida plenamente incluso por quienes no
adscriben al criterio que atiende a los trminos en que dicha clusula fue establecida, toda
vez que para los seguidores de esta corriente la exigibilidad de la obligacin se producir
siempre y a todo evento, en el caso del pago en cuotas, por la mora de una de ellas.
Sexto: Que el artculo 2514 del Cdigo Civil dispone que la prescripcin que extingue las
acciones y derechos ajenos exige solamente cierto lapso de tiempo durante el cual no se
hayan ejercido dichas acciones. Se cuenta este tiempo, agrega el inciso 2, desde que la
obligacin se haya hecho exigible. Por su parte, el inciso 1 del artculo 2515 del mismo
texto legal establece que este tiempo es en general de tres aos para las acciones
ejecutivas y de cinco para las ordinarias.
En este contexto, si los sentenciadores han fijado como hecho de la causa que la deudora
se constituy en mora al vencimiento de la sexta cuota, el 6 de enero de 2002, debe
necesariamente concluirse, por una parte, que a partir de esta fecha se devengaron las
653
Por estas consideraciones y visto, adems, lo dispuesto en las normas legales citadas y
en los artculos 764, 765, 767 y 805 del Cdigo de Procedimiento Civil, se acoge el
recurso de casacin en el fondo deducido por la parte ejecutada en lo principal de la
presentacin de fojas 69, contra la sentencia de treinta de junio de dos mil ocho, escrita a
fojas 66, la que se invalida y se reemplaza por la que se dicta acto continuo, sin nueva
vista, pero separadamente.
Se previene por los Ministros seor Muoz y seor Silva que de esta manera y por los
razonamientos expresados, alteran lo que fue su voto particular en los autos Rol N
3.90808.
Regstrese.
Pronunciado por los Ministros seor Sergio Muoz G., seora Margarita Herreros M., Juan
Araya E. y Guillermo Silva G. y Abogado Integrante seor Benito Mauriz A.
654
Rol N 5.21408.
Los fundamentos expuestos en los motivos tercero a sexto del fallo de casacin que
antecede, se confirma, en lo apelado, la sentencia de quince de junio de dos mil cuatro,
escrita a fojas 49.
Pronunciado por los Ministros seor Sergio Muoz G., seora Margarita Herreros M., Juan
Araya E. y Guillermo Silva G. y Abogado Integrante seor Benito Mauriz A.
Rol N 5.21408.
655
656
Tema Clave
Tribunal
Considerando
C. Santiago
1 y 2.
Buena Fe Contractual
C. Santiago
1.
Dao Moral.
C. Santiago
7.
Dao Emergente
C. Santiago
6.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
1. Que, la ejecucin de los contratos debe realizarse de buena fe, y en consecuencia,
las partes no slo se obligan a lo que en ellos se manifiesta expresamente, sino tambin a
todas aquellas cosas que emanan precisamente de la naturaleza misma de la obligacin o
que por la ley o la costumbre pertenecen a ella. En este sentido, a efectos de determinar
la correcta ejecucin de los contratos y de los derechos y obligaciones que ellos generan
para las partes, los artculos 1560 y siguientes del Cdigo Civil disponen una serie de
657
2. Que, en la especie, la demandante sostiene, por un lado, la existencia para las partes
de obligaciones no sealadas expresamente en el contrato suscrito con la demandada con
fecha 14 de diciembre de de dos mil cuatro, rolante a fojas 13 y siguientes de autos; y, por
otro, el incumplimiento culpable de tales obligaciones por parte de la demandada. Por tal
motivo, solicita la resolucin del referido contrato con indemnizacin de perjuicios.
658
5. Que, con la prueba rendida en autos, se ha acreditado que la intencin de las partes
al suscribir el contrato de fecha 14 de diciembre de 2004, rolante a fojas 13 y siguientes,
no slo se extiende a las obligaciones consignadas en su texto, siendo parte integrante
del mismo, adems, las obligaciones sealadas por la actora en su libelo de fojas 1 y
siguientes, las que fueron incumplidas culpablemente por la demandada, irrogando con
ello perjuicios a la demandante.
6. Que, en relacin con el dao emergente alegado por la actora, cabe hacer lugar
nicamente a aquellos que son consecuencia necesaria y directa del incumplimiento de la
demandada y que se encuentran debidamente acreditados en autos. En consecuencia,
por no haber sido probado fehacientemente en autos y no haberse establecido directa y
necesariamente su relacin con el incumplimiento de la demandada, slo se dar lugar a
indemnizacin por este concepto en lo que dice relacin con el gasto incurrido por la
actora al suscribir el contrato de autos, cuyo monto asciende a $605.000., descartndose
la indemnizacin por los pagos supuestamente efectuados por la actora por concepto de
vacaciones programadas con otra empresa turstica, gastos judiciales y de abogado,
gastos varios ocasionados con motivo de las reuniones sostenidas entre la actora y la
demandada, y gastos derivados de atencin de salud.
659
REGLA .
a.- A efectos de determinar la correcta ejecucin de los contratos y de los derechos y
obligaciones que ellos generan para las partes, los artculos 1560 y siguientes del Cdigo
Civil disponen una serie de reglas interpretativas, siendo fundamental aqulla consignada
en el primero de dichos artculos, en cuanto establece que conocida claramente la
intencin de los contratantes, debe estarse a ella ms que a lo literal de las palabras. Esto
es as, por cuanto los contratos son celebrados por los particulares, por personas que
ordinariamente no tienen un conocimiento cabal y completo del lenguaje, que pueden dar
a las palabras un sentido distinto del que les da el Diccionario; y si hubieran de aplicarse
en la interpretacin de los contratos las mismas reglas que se dan para la determinacin
de las leyes, se cometeran muchas injusticias, y probablemente se dara a los contratos
un sentido muy distinto del que quisieron darle las partes. Para evitar estos
inconvenientes, la ley ha dispuesto que lo primero que deba hacer un juez al interpretar un
contrato, es buscar la intencin de las partes; y es muy lgico que el juez proceda as,
porque los contratos se generan mediante la voluntad de las partes, y son, no lo que en el
contrato se diga, sino lo que las partes han querido estipular (Alessandri, Arturo, Derecho
Civil. De los Contratos, EdiarConosur Ltda., Santiago, pg. 65).
c.- En relacin con el dao emergente alegado por la actora, cabe hacer lugar nicamente
a aquellos daos que son consecuencia necesaria y directa del incumplimiento de la
demandada y que se encuentran debidamente acreditados en autos.
4. Cita de Fuente.
C. Santiago, 23 octubre 2009. G.J. N 352, p.149. L.P. N 42820.
Corte Santiago
Fallo:
Vistos:
contratos son celebrados por los particulares, por personas que ordinariamente no tienen
un conocimiento cabal y completo del lenguaje, que pueden dar a las palabras un sentido
distinto del que les da el Diccionario; y si hubieran de aplicarse en la interpretacin de los
contratos las mismas reglas que se dan para la determinacin de las leyes, se cometeran
muchas injusticias, y probablemente se dara a los contratos un sentido muy distinto del
que quisieron darle las partes. Para evitar estos inconvenientes, la ley ha dispuesto que lo
primero que deba hacer un juez al interpretar un contrato, es buscar la intencin de las
partes; y es muy lgico que el juez proceda as, porque los contratos se generan mediante
la voluntad de las partes, y son, no lo que en el contrato se diga, sino lo que las partes
han querido estipular (Alessandri, Arturo, Derecho Civil. De los Contratos, EdiarConosur
Ltda., Santiago, pg. 65).
2. Que, en la especie, la demandante sostiene, por un lado, la existencia para las partes
de obligaciones no sealadas expresamente en el contrato suscrito con la demandada
con fecha 14 de diciembre de de dos mil cuatro, rolante a fojas 13 y siguientes de autos;
y, por otro, el incumplimiento culpable de tales obligaciones por parte de la demandada.
Por tal motivo, solicita la resolucin del referido contrato con indemnizacin de perjuicios.
5. Que, con la prueba rendida en autos, se ha acreditado que la intencin de las partes
al suscribir el contrato de fecha 14 de diciembre de 2004, rolante a fojas 13 y siguientes,
no slo se extiende a las obligaciones consignadas en su texto, siendo parte integrante
del mismo, adems, las obligaciones sealadas por la actora en su libelo de fojas 1 y
siguientes, las que fueron incumplidas culpablemente por la demandada, irrogando con
ello perjuicios a la demandante.
6. Que, en relacin con el dao emergente alegado por la actora, cabe hacer lugar
nicamente a aquellos que son consecuencia necesaria y directa del incumplimiento de la
demandada y que se encuentran debidamente acreditados en autos. En consecuencia,
por no haber sido probado fehacientemente en autos y no haberse establecido directa y
necesariamente su relacin con el incumplimiento de la demandada, slo se dar lugar a
indemnizacin por este concepto en lo que dice relacin con el gasto incurrido por la
actora al suscribir el contrato de autos, cuyo monto asciende a $605.000., descartndose
la indemnizacin por los pagos supuestamente efectuados por la actora por concepto de
vacaciones programadas con otra empresa turstica, gastos judiciales y de abogado,
gastos varios ocasionados con motivo de las reuniones sostenidas entre la actora y la
demandada, y gastos derivados de atencin de salud.
Por estas consideraciones, atendido lo dispuesto en los artculos 1489, 1545, 1546, 1556,
1557, 1559, 1560 y siguientes del Cdigo Civil, y 189 y siguientes del Cdigo de
Procedimiento Civil, se revoca la sentencia apelada de primera instancia de fecha seis de
diciembre de dos mil siete, escrita a fojas 77 y siguientes, que rechaz la demanda
deducida a fojas 1 y siguientes en todas sus partes, y en su lugar se declara:
664
Regstrese y devulvase.
665
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Obligaciones Incausadas.
C. Santiago
7.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
7) Que, tantos los textos substantivos como adjetivos o formales sealados
precedentemente imponen al Juez la obligacin, en cada caso particular, de desentraar
las peculiaridades del ttulo cuando se trata de un juicio de la naturaleza del de autos, y,
en especial, las circunstancias de hecho, comerciales y de toda naturaleza que haya dado
motivo u origen al ttulo y la finalidad que con la subinscripcin del Pagar se haya
pretendido tanto por el acreedor como por el deudor. El Juez no puede limitarse a la
simple constatacin de los aspectos formales del ttulo, en este caso del Pagar, a la sola
luz del artculo 102 de la Ley N 18.092, sino que ha de detenerse necesariamente en la
contemplacin reflexiva necesaria del negocio jurdico existente entre las partes ya desde
666
REGLA .
a.- En aquellas obligaciones clasificadas como incausadas, tales como los ttulos de
crdito, tratndose del suscriptor y beneficiario que dan origen al instrumento, se debe por
el juez desentraar las peculiaridades del ttulo y, en especial, las circunstancias de
hecho, comerciales y de toda naturaleza que hayan dado motivo u origen al ttulo, as
como a la finalidad que hayan pretendido en su suscripcin, tanto el deudor como el
acreedor. El Juez no puede limitarse a la simple constatacin de los aspectos formales del
pagar, a la sola luz del artculo 102 de la Ley N 18.092,, sino que ha de detenerse
necesariamente en la contemplacin reflexiva necesaria del negocio jurdico existente
entre las partes ya desde antes de la suscripcin del documento.
4. CITA DE FUENTE.
C. Santiago, 23 octubre 2009. G.J. N 352, p.155. L.P. N 42822.
Corte Santiago
Fallo:
Vistos:
A fojas 176, el abogado seor Carlos Hernn Prez Prado, actuando en representacin
de la Sociedad Agrcola La Puntilla Ltda. , interpone recursos de casacin en la forma y
667
Concedidos los recursos, se trajo los autos en relacin, habindose procedido a la vista
de la causa en la audiencia del da 11 de septiembre de 2009, habindose odo alegatos
de los abogados de ambas partes.
Teniendo presente:
a. Que, con arreglo a lo dispuesto en los artculos 764 y siguientes del Cdigo de
Procedimiento Civil, interpone recurso de casacin en la forma en contra de la sentencia
dictada con fecha 29 de agosto del ao en curso, escrita a fojas 150 y siguientes,
mediante la cual se rechazaron todas y cada una de las excepciones opuestas por su
parte, para que, conociendo del recurso, esta Corte de Apelaciones invalide la sentencia y
dicte la de reemplazo que corresponde, fundando el recurso de nulidad en la causal 9a
del artculo 768 del Cdigo de Enjuiciamiento Civil, es decir, en haberse faltado a algn
trmite o diligencia declarado esencial por la ley o a cualquier otro requisito por cuyo
defecto las leyes prevengan expresamente que hay nulidad, en relacin con el N 4 del
artculo 795 del mismo cuerpo legal;
668
1. La del nmero 9 del artculo 464 del Cdigo de Procedimiento Civil esto es, el pago
de la deuda , y la del nmero 13 del mismo artculo, esto es, la compensacin; que, en
efecto, consta en autos que su representada efectu a la contraria importantes entregas
de frutos ctricos y paltas, que fueron exportadas por la contraria entre los aos 2002 a
2007; que, con el producto de dichas exportaciones, los montos de los Pagars fueron
ampliamente cubiertos, recibiendo la contraria ntegramente el precio por cada
exportacin, lo que devenga necesariamente en que los Pagars que garantizaban el
pago de los anticipos se encuentran ya sea pagados o compensados; que el artculo 768
N 9 del Cdigo de Procedimiento Civil autoriza la interposicin de un recurso de nulidad
formal cuando en la sentencia se ha faltado a algn trmite o diligencia declarados
esenciales por la ley o a cualquier otro requisito por cuyo defecto las leyes prevengan
expresamente que hay nulidad; que, en el caso que nos ocupa, la resolucin impugnada
ha faltado a algn trmite declarado esencial, conforme lo establece el artculo 795 N 4
del Cdigo de Procedimiento Civil, esto es, la prctica de diligencias probatorias cuya
omisin produjo indefensin para su parte; que, en efecto, la sentencia no acoge las
citadas excepciones de pago o compensacin, sin siquiera pronunciarse sobre los dems
elementos que las constituan, como es el hecho de haber recibido la contraria
ntegramente el precio de las exportaciones, lo que desvirta los Pagars de autos,
respecto de lo cual hay suficiente prueba documental que lo acredita, y no discutida en
cuanto al fondo por la contraria, sino que slo intenta desvincularla de los Pagars; que, al
669
efecto, y para acreditar las excepciones opuestas, se solicit por su parte la realizacin de
un peritaje contable para determinar el pago o la compensacin en virtud de las relaciones
comerciales que ligaban a las empresas; que tal solicitud fue acogida por el Tribunal a
quo, entendiendo que la no realizacin de esta diligencia dejara en la indefensin de su
representada; que sin embargo, y por razones ajenas a su parte, el perito designado
demor en aceptar su cargo, habiendo su representado abonado incluso parte de los
honorarios del perito designado; que, la contraria valindose de esta demora, solicit citar
a or sentencia, a lo que el tribunal accedi, no obstante que debi necesariamente
decretar como medida para mejor resolver la diligencia de Peritaje Contable que
determinara fehacientemente y concluyera si la obligacin se haba extinguido por el pago
de la deuda producto de las exportaciones por las que la contraria reciba directamente el
precio, sin informar a su parte , ello en virtud de lo dispuesto en el artculo 431 del Cdigo
de Procedimiento Civil, toda vez que la no realizacin de este Peritaje ha dejado en la
indefensin a su parte, obligndola en la prctica a pagar dos veces (159) y 795 N 4):
d. Que el tribunal no poda de manera alguna fallar la causa sin la realizacin de esta
pericia, toda vez que, encontrndose acreditada la relacin comercial y el acuerdo,
incluyendo los pagos referidos, por propio reconocimiento del demandante, no poda sino
decretar esta diligencia para mejor resolver, puesto que no hay claridad en lo absoluto del
crdito que reclama la contraria, sino por el contrario, el Tribunal, con su actuar, ha dejado
en la indefensin absoluta a su representada, sin resolver un hecho evidente y
controvertido como es la efectividad de pago o la compensacin de la deuda;
e. Que el recurso de casacin tiene por finalidad proteger el cumplimiento de las leyes
del procedimiento, tanto en lo que dice relacin con la tramitacin como en lo referente al
pronunciamiento del fallo, finalidad que adquiere rango constitucional a la luz de lo
dispuesto por el artculo 19 N 3 de la Constitucin Poltica de 1980, bajo el principio del
debido proceso; que, amparada en lo sealado sub lite, no existe duda alguna que la
sentencia recurrida ha violentado la causal 4 del artculo 768 del Cdigo de
Enjuiciamiento Civil, por lo que la nulidad formal impetrada debe ser declarada; que ello
ha influido notoriamente en lo dispositivo del fallo recurrido, toda vez que no existe razn
alguna para que la sentenciadora se haya atribuido facultades para pronunciarse de oficio
sobre la validez o invalidez del contrato, lo que ha hecho que omita una diligencia esencial
para dilucidar la controversia de autos y dejado en la indefensin a su parte, por lo que
solicita que esta Corte, acogiendo el recurso, invalide el fallo recurrido y dicte el
correspondiente fallo de reemplazo, en el que se resuelva que se acogen las excepciones
opuestas por su parte, con costas;
3) Que el artculo 768 inciso 3 del Cdigo de Procedimiento Civil, luego de sealar las
diversas causales que permiten el recurso de casacin en la forma, autoriza al Tribunal
670
En el Considerando 12, se suprime todo su texto que va desde las palabras: Al respecto,
hasta la voz: rechazada ; y
b) Que as, y en garanta de las entregas de las frutas y otros productos, se suscribieron
los Pagars que hoy pretende cobrar ntegramente la contraria; que, al efecto, su
representada naturalmente opuso las excepciones de pago y compensacin de las
671
deudas, toda vez que entre los aos 2002 a 2007 ella efectu importantes entregas de
ctricos y paltas a la contraria, la que se pag directamente con el precio de tales
exportaciones, lo que no ha sido discutido por la ejecutante; que el argumento de la
contraria para desvirtuar tales excepciones nicamente se funda en que el Pagar es un
documento abstracto, que se independiza de su origen; que, sin embargo, y conforme lo
ha dicho la doctrina y jurisprudencia de los Tribunales, es el origen del documento el que
en definitiva determinar si se puede separar de los hechos que constituyen su causa;
que, en efecto y a mayor abundamiento, tales Pagars se hicieron para garantizar los
anticipos y en el marco de un contrato de compraventa de productos agrcolas, el que fue
acompaado y no discutido por la contraria en cuanto a su existencia; que, sin embargo,
el Tribunal, pasando por alto la relacin comercial que motiv la existencia de los
Pagars, seala que slo se pretende en estos autos el pago de los mismos en los
considerandos 11 y 13, desestimando las entregas de frutas realizadas por las que
efectivamente la contraria percibi el precio por las exportaciones; y que por ltimo,
habindose solicitado el Peritaje Contable, necesario para acreditar las excepciones
opuestas, accede a la solicitud de citar a las partes para or sentencia, sin que el perito
haya aceptado el cargo, dejando a su parte en la indefensin, en conformidad con el N 4
del artculo 795 del Cdigo de Procedimiento Civil, y sin siquiera haberlo reiterado como
medida para mejor resolver, por todo lo cual solicita que esta Corte, acogiendo el recurso,
declare que se acogen tales excepciones, con costas;
8) Que, procediendo del modo antes programado, a juicio de esta Corte los Pagars en
que se funda la ejecucin no han tenido el mrito suficiente para dar inicio a un juicio
ejecutivo, an cuando aparentemente cumpla con las exigencias impuestas al Pagar en
cuanto a su descripcin formal y a su contenido. En efecto, en esta causa aparece
claramente demostrado que entre las partes hubo una negociacin largamente extendida
en el tiempo, negociacin tpicamente comercial de venta y exportacin de fruta, con
pagos y anticipos parciales y pendientes reconocidos, lo que haca indispensable la
existencia previa de un juicio declarativo, el que, slo mediante una sentencia tambin
declarativa, habra podido establecer con exactitud los derechos y obligaciones
pendientes y recprocas de las partes, luego del desarrollo que solo un juicio ordinario de
la lato conocimiento habilitara el logro de esa finalidad. Resolver de otro modo, como se
ha concluido en la sentencia en alzada, pugna con el principio superior de la equidad y de
la justicia, pues la sola consideracin de los antecedentes formales del Pagar de autos
ha sido aqu insuficiente para resolver el juicio en estricta justicia. En este sentido, resulta
meridianamente clara la literal afirmacin de la parte demandada cuando sostiene que
aqu no hay claridad en lo absoluto del crdito que reclama la contraria;
discutido por la ejecutante, y que los Pagars tuvieron por objeto garantizar los anticipos y
se subscribieron en el marco de un Contrato de Compraventa de productos agrcolas, el
que habra sido acompaado y no discutido por la demandante;
10) Que, tales condiciones, y siendo deber primordial del rgano jurisdiccional el de
desentraar la verdad siempre difcil de asir en controversias de esta clase, debi al
menos como medida para mejor resolver ordenar el Peritaje pedido en autos, an como
medida para mejor resolver, nico modo de garantizar a los litigantes la salvaguarda de
un racional y justo procedimiento; y
Por estas consideraciones y citas legales, y atendido tambin lo dispuesto en los artculos
170 y 471 del Cdigo de Procedimiento Civil, se decide:
b) Que se revoca la misma sentencia, en cuanto en ella se rechazan con costas las
excepciones opuestas por el ejecutado y ordena continuar la ejecucin hasta hacerse
entero y cumplido el pago de lo adeudado al ejecutante, y, en su lugar, se declara que se
acoge slo la excepcin de nulidad de la obligacin opuesta por la parte ejecutada, y que
no se emite pronunciamiento sobre las excepciones de pago de la deuda, de esperas o
prrroga del plazo y de compensacin, por ser stas incompatibles con lo resuelto; y
674
Pronunciada por la Sptima Sala de esta Corte de Apelaciones, presidida por el Ministro
seor Cornelio Villarroel Ramrez e integrada por la Ministra seora Pilar Aguayo Pino y
por la Abogado Integrante seor Patricio Gonzlez Marn.
Rol N 7.3762008.
675
Tribunal
C. Santiago
Considerando
4, 5 y 6.
pagar en 1998, lo que dara hasta la fecha de la compra, 54 cuotas de $462.900 promedio
mensual, lo que representa un 62,6% del ingreso acreditado, situacin tambin poco
creble, en especial si se considera su calidad de padre de familia con las
responsabilidades propias de esa condicin; y que no se cuenta con ningn antecedentes
relativo a la recepcin ni al destino sea en ocupacin o en depsito/ahorro de los
dineros pagados a ttulo de precio.
5) Que los elementos o bases de presuncin sealados renen los caracteres de
gravedad, precisin y concordancia que exigen tanto la ley de fondo como la procesal, por
lo que permiten dar por probado el hecho ya afirmado en el fundamento 3,
correspondiendo, entonces, acceder a lo pedido subsidiariamente por la actora.
6) Que la objecin planteada por los demandados en relacin a la falta de legitimacin
activa de la demandante, por carecer de un inters jurdico efectivo que sustente su
accin, debe ser desestimada, pues ella es legitimaria y, actuando como tal, ha solicitado
que las donaciones que en realidad constituyeron los contratos (simulados) impugnados
sean dejadas sin efecto y los bienes de que se trata vuelvan a la masa hereditaria, para
someterse a la particin que es pertinente, previos los trmites de rigor. As las cosas, la
situacin planteada es del todo asimilable en condiciones y resultados a la prevista en
los artculos 1186 y 1187 del Cdigo Civil, pues la actora era legitimaria a la fecha de las
donaciones efectuadas a extraos no legitimarios, y segua sindolo a la muerte de la
causante (su madre) que efectu esas donaciones, las que ciertamente fueron excesivas.
9) Que no se rindi prueba tendiente a acreditar el dao moral demandado, por lo que se
desestimar este rubro.
Resuelve: A) Que se hace lugar a la peticin subsidiaria planteada en la demanda, por la
cual se declara que la voluntad real de las partes en los contratos que constan en las
escrituras de fojas 2 a 5 y de fojas 6 a 9, celebrados por doa Mabel Jimnez Acua con
doa Usmenia Daz Hernndez y por don Oscar Jimnez Romero con doa Usmenia Daz
Hernndez, respectivamente, fue la de donacin y no de compraventa, y que dichos
contratos son nulos por la simulacin efectuada y por haberse omitido en ellos el trmite
de insinuacin. B) Que, en consecuencia, los bienes de que se trata deben restituirse por
los demandados a la sucesin de doa Usmenia Daz Hernndez, en cuya masa
hereditaria quedan reincorporados los inmuebles ubicados en calle Alberto Llona N 1250
y en el Pasaje Fernando VII N 360, ambos de Maip.
3.- REGLA .
a.- Si en un contrato de compraventa la vendedora era una persona de 76 aos; su salud
estaba deteriorada, necesitaba el consumo de antidepresivos, con cansancio y poco
nimo, llanto fcil y debilidad emocional; si falleci aproximadamente al ao y medio
despus de celebrarse los contratos de compraventa impugnados; si los compradores
vivan con ella, siendo cuidada y representada por su hija, cnyuge del comprador y
madre de la otra compradora; si en ambas escrituras de compraventa aparecen pagados
los precios mediante cuotas sucesivas pagadas con anterioridad al contrato, a entera
satisfaccin de la vendedora; si una de las compradoras Mabel Jimnez Acua seala que
su ingreso mensual lquido era de $500.000 en promedio, que comenz a pagar en
febrero de 2000, lo que hace 32 cuotas hasta la fecha de la compra, que lo fue por
$10.000.000, lo que supone cuotas de $312.500 mensuales promedio ya que dice que
no fueron iguales, esto es, un 62,5% de su ingreso declarado, monto que no es creble,
677
porque la deja slo con $187.500 mensuales para otros gastos, como movilizacin,
colacin, vestuario, etc.; si el otro comprador tena una renta lquida mensual promedio de
$738.739, sin que haya acreditado fehacientemente otros ingresos, a lo que estaba
obligado, y aparece pagando un precio de $25.000.000, sealando al absolver posiciones
que comenz a pagar en 1998, lo que dara hasta la fecha de la compra, 54 cuotas de
$462.900 promedio mensual, lo que representa un 62,6% del ingreso acreditado, situacin
tambin poco creble, en especial si se considera su calidad de padre de familia con las
responsabilidades propias de esa condicin; y que no se cuenta con ningn antecedentes
relativo a la recepcin ni al destino sea en ocupacin o en depsito/ahorro de los
dineros pagados a ttulo de precio; la voluntad real de las partes en los contratos de
compraventa referidos fue la de efectuar, la vendedora, donaciones a los compradores,
que lo fueron su yerno y su nieta.
Dichos contratos son nulos por la simulacin efectuada y por haberse omitido en ellos el
trmite de insinuacin. En consecuencia, los bienes de que se trata deben restituirse por
los demandados a la sucesin de la vendedora, en cuya masa hereditaria quedan
reincorporados.
b.- No se rindi prueba tendiente a acreditar el dao moral demandado, por lo que se
desestimar este rubro.
4.- CITA DE FUENTE.
C. Santiago, 02 octubre 2009. G.J. N 353, p.107. L.P. N 42951.128
Texto completo de la Sentencia
Corte Santiago
Fallo:
Santiago, dos de noviembre de dos mil nueve.
Vistos:
Se reproduce la sentencia en alzada, con excepcin de sus fundamentos 8 a 13, ambos
inclusive, que se eliminan.
Y se tiene en su lugar y adems presente:
1) Que adems de pedirse la declaracin de nulidad de los contratos de compraventa,
por adolecer de causa ilcita, en forma subsidiaria se ha solicitado por la actora se declare
la voluntad real de los contratantes, cual habra sido efectuar donaciones irrevocables en
beneficio de los compradores parientes de la vendedora pero no legitimarios, lo cual
importa que no existi voluntad de vender y que existi, entonces, una simulacin relativa,
pues mientras se dijo comprar lo que efectivamente se hizo fue donar; por lo que se pide,
consecuencialmente, se declare la nulidad de los contratos de que se trata, ya que no se
128
La parte vencida dedujo recurso de casacin en la forma pero no consign dinero para las compulsas
dentro de plazo, tenindosele por desistido.
678
cumpli con el trmite de la insinuacin, que era exigible atendido el monto de lo donado,
conforme a lo dispuesto por los artculo 1401, 1682 y 1560 del Cdigo Civil.
2) Que no se ha rendido prueba capaz de acreditar la causal de nulidad invocada, esto
es, adolecer los contratos de causa ilcita, que se funda en que no hubo intencin de
comprar y vender, sino de defraudar en su legtima a la actora; por lo que esta primera
peticin debe ser desestimada.
3) Que, por el contrario, los elementos probatorios reunidos en el proceso, constituyen
base suficiente de presuncin para estimar acreditado que la voluntad real de las partes
en los contratos de compraventa referidos fue la de efectuar, la vendedora, donaciones a
los compradores, que lo fueron su yerno y su nieta.
4) Que, en efecto, fluye del mrito de autos que la vendedora era una persona de 76
aos; que su salud estaba deteriorada, que necesitaba el consumo de antidepresivos, con
cansancio y poco nimo, llanto fcil y debilidad emocional (ficha mdica anexada a los
autos); que falleci aproximadamente al ao y medio despus de celebrarse los contratos
de compraventa impugnados; que los compradores vivan con ella, siendo cuidada y
representada por su hija, cnyuge del comprador y madre de la otra compradora
(absolucin de posiciones de doa Alejandra Acua Daz de fojas 115 a 120 y escritura de
fojas 96 a 99); que en ambas escrituras de compraventa aparecen pagados los precios
mediante cuotas sucesivas pagadas con anterioridad al contrato, a entera satisfaccin de
la vendedora; que la compradora Mabel Jimnez Acua (absolucin de fojas 125 y
siguientes) seala que su ingreso mensual lquido era de $500.000 en promedio, que
comenz a pagar en febrero de 2000, lo que hace 32 cuotas hasta la fecha de la compra,
que lo fue por $10.000.000, lo que supone cuotas de $312.500 mensuales promedio ya
que dice que no fueron iguales, esto es, un 62,5% de su ingreso declarado, monto que
no es creble, porque la deja slo con $187.500 mensuales para otros gastos, como
movilizacin, colacin, vestuario, etc.; que el comprador Oscar Jimnez Romero tena una
renta lquida mensual promedio de $738.739 (oficio INE, de fojas 148), sin que haya
acreditado fehacientemente otros ingresos, a lo que estaba obligado, y aparece pagando
un precio de $25.000.000, sealando al absolver posiciones (fojas 190) que comenz a
pagar en 1998, lo que dara hasta la fecha de la compra, 54 cuotas de $462.900 promedio
mensual, lo que representa un 62,6% del ingreso acreditado, situacin tambin poco
creble, en especial si se considera su calidad de padre de familia con las
responsabilidades propias de esa condicin; y que no se cuenta con ningn antecedentes
relativo a la recepcin ni al destino sea en ocupacin o en depsito/ahorro de los
dineros pagados a ttulo de precio.
5) Que los elementos o bases de presuncin sealados renen los caracteres de
gravedad, precisin y concordancia que exigen tanto la ley de fondo como la procesal, por
lo que permiten dar por probado el hecho ya afirmado en el fundamento 3,
correspondiendo, entonces, acceder a lo pedido subsidiariamente por la actora.
6) Que la objecin planteada por los demandados en relacin a la falta de legitimacin
activa de la demandante, por carecer de un inters jurdico efectivo que sustente su
accin, debe ser desestimada, pues ella es legitimaria y, actuando como tal, ha solicitado
que las donaciones que en realidad constituyeron los contratos (simulados) impugnados
sean dejadas sin efecto y los bienes de que se trata vuelvan a la masa hereditaria, para
someterse a la particin que es pertinente, previos los trmites de rigor. As las cosas, la
situacin planteada es del todo asimilable en condiciones y resultados a la prevista en
679
los artculos 1186 y 1187 del Cdigo Civil, pues la actora era legitimaria a la fecha de las
donaciones efectuadas a extraos no legitimarios, y segua sindolo a la muerte de la
causante (su madre) que efectu esas donaciones, las que ciertamente fueron excesivas.
7) Que, como consecuencia de lo razonado hasta ahora, debe tambin accederse a lo
pedido en cuanto a cancelar o dejar sin efecto las inscripciones conservatorias derivadas
de los contratos anulados.
8) Que los demandados que aparecieron como compradores (simulados) en esos
contratos deben ser tenidos por la forma y circunstancia de ocurrencia de los hechos
como poseedores de mala fe, por lo que debern restituir los frutos percibidos conforme a
las reglas de los artculos 904 y siguientes del Cdigo Civil, debiendo fijarse el monto en
la etapa de cumplimiento incidental de la sentencia.
9) Que no se rindi prueba tendiente a acreditar el dao moral demandado, por lo que se
desestimar este rubro.
10) Que los demandados no fueron totalmente vencidos, por lo que se les eximir de las
costas.
Por estos fundamentos, se revoca la sentencia de treinta y uno de julio de dos mil siete,
escrita a fojas 205 y siguientes, que desestim totalmente la demanda y dispuso el
alzamiento de una precautoria, resolvindose en cambio, lo siguiente:
A) Que se hace lugar a la peticin subsidiaria planteada en la demanda, por la cual se
declara que la voluntad real de las partes en los contratos que constan en las escrituras
de fojas 2 a 5 y de fojas 6 a 9, celebrados por doa Mabel Jimnez Acua con doa
Usmenia Daz Hernndez y por don Oscar Jimnez Romero con doa Usmenia Daz
Hernndez, respectivamente, fue la de donacin y no de compraventa, y que dichos
contratos son nulos por la simulacin efectuada y por haberse omitido en ellos el trmite
de insinuacin.
B) Que, en consecuencia, los bienes de que se trata deben restituirse por los
demandados a la sucesin de doa Usmenia Daz Hernndez, en cuya masa hereditaria
quedan reincorporados los inmuebles ubicados en calle Alberto Llona N 1250 y en el
Pasaje Fernando VII N 360, ambos de Maip.
C) Que el seor Conservador de Bienes Races de Santiago proceder a cancelar las
inscripciones de Dominio que rolan a fojas 30.433, N 27477 del ao 2003 y a fojas
48554, N 52.622 del ao 2002, quedando revalidadas las inscripciones inmediatamente
anteriores; para lo cual se le oficiar por el tribunal a quo, ejecutoriada que sea la
sentencia.
D) Que los demandados deben ser considerados como poseedores de mala fe, debiendo
fijarse el monto de los frutos percibidos que deben restituir en la etapa de cumplimiento
incidental del fallo.
E) Que se desestima lo pedido por concepto de dao moral.
F) Que no se condena en costas, por no haber existido vencimiento total.
680
681
Tema Clave
Tribunal
Hipoteca:
contrato C. Suprema
accesorio; extincin e
interrupcin
de
la
prescripcin.
Considerando
6., 7., y 8.
2.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
Sexto: Que, a su turno, el artculo 2407 del Cdigo Civil ha definido la hipoteca como un
682
derecho de prenda, constituido sobre inmuebles que no dejan por eso de permanecer en
poder del deudor. El inciso 1 del artculo 2384 del mismo cuerpo legal dispone que por el
contrato de empeo o prenda se entrega una cosa mueble a un acreedor para la
seguridad de su crdito y el artculo 2386 seala que este contrato supone siempre una
obligacin principal a que accede.
artculo 2428 del Cdigo Civil) y a venderlo para el pago de su acreencia (derecho de
venta, reglamentado en el artculo 2424 del mismo cuerpo legal).
El primero de los derechos nombrados permite, como se dijo, perseguir el bien raz
hipotecado en poder de quien se encuentre y esta persona puede ser perfectamente una
distinta al deudor personal. Sin perjuicio de ello, el acreedor puede tambin, no obstante
la garanta hipotecaria, pretender el pago de su crdito en la realizacin de otros bienes
del deudor, en virtud del derecho de prenda general que tiene sobre todos ellos. Y en el
evento de no haberlos o ser stos insuficientes, podr siempre dirigirse contra quien tenga
en su poder el inmueble hipotecado.
Dcimo cuarto: Que de esta manera y aplicando las nociones arriba sealadas al asunto
que nos convoca, resulta que en el juicio ejecutivo Rol N 16.059, seguido en contra del
deudor personal ste no opuso excepciones a la ejecucin, producindose el efecto a que
se refiere el artculo 472 del Cdigo de Procedimiento Civil que establece que si el
ejecutado no se ha opuesto a la ejecucin en el plazo fatal que tena para hacerlo, se
omitir la sentencia y bastar el mandamiento de ejecucin para que el acreedor pueda
perseguir la realizacin de los bienes embargados y el pago, de conformidad a las
disposiciones del procedimiento de apremio.
REGLA .
a.- Dos de las caractersticas principales del contrato de hipoteca: constituye una caucin,
esto es, una obligacin que se contrae para las seguridad de otra obligacin, propia o
ajena (artculo 46 del Cdigo Civil) y es un contrato accesorio, es decir, necesita de otra
convencin principal a la cual acceder para subsistir (artculo 1442 de ese texto
normativo).
685
4. CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 05 noviembre 2009. M.J. N 22230
Corte Suprema
Fallo:
686
Vistos:
Mediante sentencia de siete de enero de dos mil ocho, escrita a fojas 466 de estas
compulsas, el juez titular del referido tribunal, rechaz las excepciones opuestas y orden
seguir adelante con la ejecucin hasta hacerse entero y cumplido pago de lo adeudado,
con reajustes, intereses y costas.
Considerando:
Primero: Sostiene el recurrente que se ha hecho una errada aplicacin de los artculos
1442 y 1546 del Cdigo Civil, y que con ello se vulnera el artculo 19 N 3 de la
Constitucin y el artculo 464 N 7 del Cdigo de Procedimiento Civil. Seala que si bien
su representada constituy una garanta general de hipoteca, a favor del Banco Estado
para garantizar el cumplimiento de cualquier obligacin que don Pedro Zavala Rejas haya
contrado o contrajese con el banco, mediante escritura pblica de fecha 3 de octubre de
1996, en circunstancias que el juicio ejecutivo Rol N 16.059-96 sobre cobro de pagar
caratulado "Banco del Estado con Zavala Rejas", se inici el en el mes abril de 1996 con
sentencia de pago en mayo de ese ao, por lo que cuando constituy la hipoteca que nos
ocupa, el deudor se encontraba constituido en mora y su acreedor ya haba iniciado un
687
Aade que de haber pretendido hacerse cargo de dicha deuda, hubiera sealado en
forma expresa que garantizaba dicho pagar o habra celebrado alguna transaccin con el
acreedor en el mismo expediente Rol N 16.059-96, ms an considerando que el avalo
del inmueble que hipotec asciende a $ 4.000.000 y el pagar se suscribi por 2.533 UF.
A su juicio, esta situacin hace que el pagar que supone la obligacin principal carece de
los requisitos para tener fuerza ejecutiva, puesto que ste le era inoponible en relacin
con el contrato de garanta celebrado, contrato accesorio que requiere de uno principal
para ser actualmente exigible, por lo que se han vulnerado los preceptos ya sealados.
A continuacin estima que la sentencia censurada realiza una falsa aplicacin de los
artculos 2516 del Cdigo Civil y artculos 98 y 100 en relacin al artculo 107 de la ley
18092; y con ello del artculo 19 N 3 de la Constitucin Poltica, en lo atinente a la
prescripcin. Explica que el pagar se encuentra prescrito, puesto que el plazo de
prescripcin es de un ao, toda vez que el ejecutante hizo uso de la clusula de
aceleracin fijando como fecha de exigibilidad el 18 de noviembre de 1995 y an
considerando la ltima cuota de vencimiento el 18 de mayo de 1999, la demanda de
desposeimiento fue notificada el 7 de mayo de 2002, habiendo transcurrido el trmino de
un ao.
En lo conclusivo seala que de acuerdo con lo dispuesto en el artculo 2516 del Cdigo
Civil, la accin hipotecaria prescribe junto con la obligacin a que accede y el artculo
100 de la Ley 18.101 establece que la prescripcin se interrumpe slo respecto del
obligado a quien se notifique la demanda judicial de cobro de letra y tambin respecto del
obligado que ha reconocido expresa o tcitamente su calidad de tal, lo que en el caso no
ocurri.
Segundo: Que para una adecuada resolucin del presente recurso y antes de entrar en el
anlisis de los errores de derecho denunciados resulta til tener presente los siguientes
antecedentes del proceso: a) El banco ejecutante inici gestin de notificacin de
688
desposeimiento en contra de doa Olga Ponce Tarque; en ella sostiene que por escritura
pblica de 3 de octubre de 1996, la ejecutada constituy a favor del Banco del Estado de
Chile hipoteca con clusula de garanta general sobre el sitio N 14 de la manzana 444 de
la Poblacin Maip, hoy calle Conrado Ros N 1811 de la Poblacin Oriente a fin de
garantizar el cumplimiento de cualquier obligacin que don Pedro Segundo Zavala Rejas
haya contrado o contrajere en el futuro con el banco, las obligaciones derivadas de
avales otorgados o que se otorguen por el Banco del Estado de Chile, a crditos
concedidos o que se le concedan por terceros y cualquier otra obligacin que por
cualquier motivo adeude o llegare a adeudar al banco, sea directa o indirectamente, como
deudor principal o como obligados al pago, como fiadores, codeudores solidarios,
avalistas o de otra manera.
Se indica que don Pedro Segundo Zavala Rejas tiene pendiente de pago con el
ejecutante el pagar reajustable N 11.506 por la suma de 2.533,0000 unidades de
fomento, que el deudor se comprometi a pagar en 10 cuotas, la primera con vencimiento
el 18 de noviembre de 1995 y la ltima el 18 de mayo de 1999.
Aade que el deudor dej de cancelar la deuda a partir de la cuota nmero 3 vencida el
18 de noviembre de1995, hacindose exigible el saldo insoluto del crdito que asciende a
UF 2.133 ms intereses penales y costas. Explica que producto del incumplimiento se
inici en contra de don Pedro Segundo Zavala Rejas un juicio ejecutivo, que se tramit
ante el Tercer Juzgado Civil de Arica, bajo el Rol N 16.059-96 en el que se subast al
deudor la propiedad de calle Ral del Canto N 1030 en $ 7.800.000, valor que ha sido
abonado a la deuda, quedando un remanente de $ 62.543.330., segn liquidacin
practicada por el banco el 10 de enero de 2000.
La primera excepcin la sustenta en que el pagar que sirve de base a la ejecucin no fue
suscrito por la ejecutada, por lo que no se le puede emplazar para que pague.
689
La oposicin que afinca en la causal del artculo 464 N 17, la funda en que han
transcurrido en exceso los trminos de un ao o tres necesarios para que opere la
prescripcin, puesto que el pagar venci el 18 de noviembre de 1995 y a la fecha han
transcurrido diez aos.
c) Del expediente Rol N 16.059-96, seguido ante el Tercer Juzgado de Letras de Arica,
caratulado "Banco del Estado de Chile con Zavala Rejas, Pedro Segundo", constan los
siguientes antecedentes:
Se dedujo demanda ejecutiva sobre cobro de pagar en contra del mencionado seor
Zavala Rejas para que se despache mandamiento de ejecucin y embargo en su contra
por la cantidad de 2.133,000 unidades de fomento, ms intereses y costas, fundado en
que el deudor no pag la cuota N 3, con vencimiento 18 de noviembre de 1995 del
pagar N 11.506, suscrito por don Pedro Zavala Rejas, por la suma de 2.533,0000
unidades de fomento
fechado 10 de enero de 2000, don Pedro Segundo Zavala Rejas, registra una deuda
castigada que asciende a la suma de $ 62.543.330, saldo que corresponde despus de
haberse aplicado a la deuda un abono por $ 7.200.000 efectuado el 27 de septiembre de
1999, producto de bienes races adjudicados en remate.
Tercero: Que los jueces del grado para desestimar las excepciones sealaron: " Que en lo
relativo a la excepcin del N 7 del artculo 464 del Cdigo de Procedimiento Civil, de
manera alguna es requisito para la validez del ttulo ejecutivo de la especie que el mismo
haya sido suscrito o aceptado por la ejecutada, misma que jurdicamente resulta obligada
en autos, y de ah su carcter de legitimaria pasiva, en la circunstancia jurdica de haber
constituido a favor del banco del Estado garanta general hipotecaria sobre el inmueble de
su propiedad para garantizar las deudas de Pedro Segundo Zavala Rejas, de ah que slo
quepa el rechazo de la presente".
Cuarto: Que del tenor del libelo de casacin se advierte que las infracciones que la
recurrente denuncia y que se sealan en el motivo primero, referidas a la prescripcin,
dicen relacin con la supuesta errada aplicacin del artculo 98 referida al plazo de
prescripcin de la accin cambiaria contenida en la Ley 18.092 y, asimismo la supuesta
falta de aplicacin de las normas relativas a la prescripcin de la accin hipotecaria que
se contienen en el Cdigo Civil en el artculo 2516, que considera reglan esta materia y
resuelven el asunto litigioso.
Quinto: Que resulta pertinente consignar que el artculo 758 del Cdigo de Procedimiento
Civil previene "Para hacer efectivo el pago de la hipoteca, cuando la finca gravada se
posea por otro que el deudor personal, se notificar previamente al poseedor, sealndole
un plazo de diez das para que pague la deuda o abandone ante el juzgado la propiedad
691
hipotecada".
Por su parte el artculo 759 del citado cuerpo legal refiere "Si el poseedor no efecta el
pago o el abandono en el plazo expresado en el artculo anterior, podr desposersele de
la propiedad hipotecada para hacer con ella pago al acreedor. Esta accin se someter a
las reglas del juicio ordinario o a las del ejecutivo, segn sea la calidad del ttulo en que se
funde, procedindose contra el poseedor en los mismos trminos en que podra hacerse
contra el deudor personal"
De dichos preceptos se desprende que para hacer efectivo frente a terceros el derecho
real de hipoteca, el Cdigo de Procedimiento Civil reglamenta un procedimiento especial
que configura la llamada accin de desposeimiento. Sin embargo, agotada tal gestin
preparatoria de notificacin y en el supuesto que el tercer poseedor no efecte el pago de
la deuda o el abandono de la finca hipotecada dentro del plazo legal, podr desposerselo
del citado inmueble para hacer con l pago al acreedor, quien dispondr de accin al
efecto, la que se someter a las reglas del juicio ordinario o las del ejecutivo, segn sea la
calidad del ttulo en que se funde, procedindose contra el poseedor en los mismos
trminos en que podra hacerse contra el deudor personal.
Sexto: Que, a su turno, el artculo 2407 del Cdigo Civil ha definido la hipoteca como un
derecho de prenda, constituido sobre inmuebles que no dejan por eso de permanecer en
poder del deudor. El inciso 1 del artculo 2384 del mismo cuerpo legal dispone que por el
contrato de empeo o prenda se entrega una cosa mueble a un acreedor para la
seguridad de su crdito y el artculo 2386 seala que este contrato supone siempre una
obligacin principal a que accede.
modos de extinguirse las obligaciones que consagra el artculo 1567 del Cdigo Civil,
entre ellos, la prescripcin liberatoria. En efecto, el artculo 2516 del mismo Cdigo
precepta que la accin hipotecaria, y las dems que proceden de una obligacin
accesoria, prescriben junto con la obligacin a que acceden. En consecuencia, el nico
modo para que la accin que emana del contrato de hipoteca se extinga por prescripcin
consiste en que se extinga por esta va la accin que nace de la obligacin cuyo
cumplimiento la hipoteca cauciona.
El primero de los derechos nombrados permite, como se dijo, perseguir el bien raz
hipotecado en poder de quien se encuentre y esta persona puede ser perfectamente una
distinta al deudor personal. Sin perjuicio de ello, el acreedor puede tambin, no obstante
la garanta hipotecaria, pretender el pago de su crdito en la realizacin de otros bienes
del deudor, en virtud del derecho de prenda general que tiene sobre todos ellos. Y en el
evento de no haberlos o ser stos insuficientes, podr siempre dirigirse contra quien tenga
en su poder el inmueble hipotecado.
sigue su curso y puede eventualmente llegar a cumplirse, extinguindose por esta va. Lo
anterior no puede aceptarse, pues importa negar las caractersticas que, segn se dijo en
el fundamento sexto de este fallo, constituyen parte de la esencia de la hipoteca.
En efecto, sise aceptara que la accin hipotecaria pudiera prescribir con prescindencia de
la accin que nace de la obligacin que se supone garantiza, la hipoteca dejara de ser,
precisamente, una garanta y se le atribuira una autonoma impropia, soslayando su
carcter de accesoria.
Noveno: Que en el caso sub judice, como se adelant, el acreedor dedujo, en primer
trmino, la accin ejecutiva de cobro de pagar en contra del deudor personal, la cual se
tramit ante el Tercer Juzgado de Letras de Arica, notificndose la demanda que se
presentara el 13 de mayo de 1996, y luego, en el presente juicio la institucin bancaria se
dirigi en contra de quien tiene a la propiedad que sirvi de garanta, atendida la falta de
solucin de lo debido.
Dcimo: Que por su parte debe tenerse presente que para que la prescripcin opere son
exigencias, primero, la inactividad del acreedor, el cual deja de ejercer un derecho del
cual es titular y, segundo, que dicha inactividad se mantenga por el tiempo que la ley
prescribe.
De lo dicho resulta que la prescripcin es una sancin para el acreedor que deja
transcurrir el tiempo sin ejercer el derecho del cual era titular y, a su vez, constituye un
beneficio para el deudor desde que al acogerse a tal institucin le permite eximirse del
cumplimiento de la obligacin que le corresponda.
A los requisitos mencionados deben agregarse que la accin sea prescriptible, esto es,
que legalmente sea posible que se extinga por su no ejercicio; que el deudor que desee
aprovecharse de la prescripcin la alegue, por cuanto no puede ser declarada de oficio, y
que la prescripcin no se encuentre interrumpida, suspendida ni renunciada.
Interrupcin que, a su vez, puede ser civil o natural. Al efecto, el artculo 2518 del Cdigo
Civil, dispone: "La prescripcin que extingue las acciones ajenas puede interrumpirse, ya
natural, ya civilmente. Se interrumpe naturalmente por el hecho de reconocer el deudor la
obligacin, ya expresa, ya tcitamente. Se interrumpe civ ilmente por la demanda judicial;
salvos los casos enumerados en el artculo 2503."
En esta materia el profesor Ren Abeliuk seala que: "La interrupcin de la prescripcin
extintiva produce el rompimiento de la inactividad de la relacin jurdica por la accin del
acreedor para cobrar su crdito o por un reconocimiento del deudor de su obligacin y
hace perder todo el tiempo corrido de la prescripcin." ("Las Obligaciones". Editorial
Jurdica Ediar "ConoSur Ltda. Pg.780)
Dcimo tercero: Que para ello debe determinarse los efectos de la interrupcin con
respecto a la nueva prescripcin que va a iniciarse, puesto que la prescripcin tiene dos
efectos, paralizar el curso de la prescripcin y hacer ineficaz todo el tiempo transcurrido
hasta que se produce el acto interruptivo.
Ahora bien, la interrupcin puede provenir del reconocimiento del deudor o de una
demanda judicial, cuyo es el caso que nos convoca, cuyas consecuencias se prolongan
en el tiempo."Los efectos interruptivos de la demanda judicial duran mientras dure la
instancia a que la demanda da origen, mientras permanezcan vinculados por ella el
acreedor demandante y el deudor demandado." (Giogi Jorge. Teora de las Obligaciones
695
Dcimo cuarto: Que de esta manera y aplicando las nociones arriba sealadas al asunto
que nos convoca, resulta que en el juicio ejecutivo Rol N 16.059, seguido en contra del
deudor personal ste no opuso excepciones a la ejecucin, producindose el efecto a que
se refiere el artculo 472 del Cdigo de Procedimiento Civil que establece que si el
ejecutado no se ha opuesto a la ejecucin en el plazo fatal que tena para hacerlo, se
omitir la sentencia y bastar el mandamiento de ejecucin para que el acreedor pueda
perseguir la realizacin de los bienes embargados y el pago, de conformidad a las
disposiciones del procedimiento de apremio.
Dcimo sptimo: Que al resolver los jueces del fondo, en el fallo que se censura, que en
la especie no ha operado la prescripcin alegada, ha existido de parte de aquellos
vulneracin a los preceptos indicados por la recurrente, desde que tales normas, referidas
a la prescripcin, han sido vulneradas.
Por estas consideraciones y de conformidad, adems, con lo dispuesto por los artculos
764, 767, 785 y 805 del Cdigo de Procedimiento Civil, se acoge el recurso de casacin
de fondo, deducido en lo principal de fojas 506, por doa Ivonne Cecilia Saavedra
Galleguillos, en representacin de la ejecutada, en contra de la sentencia de dos de julio
de dos mil ocho, escrita a fojas 504, la que se invalida y se reemplaza por la que se dicta
a continuacin, separadamente y sin nueva vista.
Regstrese.
N 4462-08
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema por los Ministros Sr. Sergio Muoz
G., Sra. Margarita Herreros M. y Sr. Guillermo Silva G. y Abogados Integrantes Sra.
Maricruz Gmez de la Torre V. y Sr. Domingo Hernndez E.
No firma la Ministra Sra. Herreros, no obstante haber concurrido a la vista del recurso y
acuerdo del fallo, por estar en comisin de servicios.
697
SENTENCIA DE REEMPLAZO
Vistos:
Primero: Que don Ral Castro Letelier, en representacin del Banco del Estado de Chile,
deduce demanda ejecutiva de desposeimiento en contra de doa Olga Ponce Tarque, a
fin de que se ordene despachar mandamiento de desposeimiento para que con el
producto de la subasta de la propiedad hipotecada, se le haga entero y cumplido pago de
la suma de $ 62.543.330. al banco ejecutante, ms intereses y costas.
Segundo: Que la ejecutada opuso la excepcin prevista en el numeral 17 del artculo 464
del Cdigo de Procedimiento Civil y la funda en que han transcurrido en exceso los
trminos de un ao o tres necesarios para que opere la prescripcin, puesto que el
pagar venci el 18 de noviembre de 1995 y a la fecha han transcurrido diez aos.
698
Cuarto: Que entre el 19 de junio de 1996 y aquella en que se notific la presente gestin
de notificacin de desposeimiento, 7 de mayo de 2002, transcurri en exceso el plazo de
un ao que establece el artculo 98 de la ley 18.092, necesario para declarar la
prescripcin de la accin ejecutiva que emana de una letra de cambio o pagar, situacin
que, en definitiva, determina concluir que deber ser acogida la excepcin de prescripcin
interpuesta por la ejecutada, la que se contempla en el artculo 464 N 17 del Cdigo de
Procedimiento Civil.
Y de conformidad, adems, con lo que disponen las normas legales citadas y artculo
186 del Cdigo de Procedimiento Civil, se declara:
a) Que se revoca la sentencia de siete de enero de dos mil ocho, escrita a fojas 467 y
siguientes de estas compulsas, en la parte que rechaza la excepcin de prescripcin, y en
su lugar se declara que tal excepcin queda acogida, absolvindose a la ejecutada Olga
Ponce Tarque de la ejecucin, con costas.
b) Se confirma la misma sentencia, en cuanto por ella se rechazan las excepciones de los
nmeros 1, 2 y 7 el artculo 464 del Cdigo de Procedimiento Civil.
699
N 4462-08. Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema por los Ministros Sr.
Sergio Muoz G., Sra. Margarita Herreros M. y Sr. Guillermo Silva G. y Abogados
Integrantes Sra. Maricruz Gmez de la Torre V. y Sr. Domingo Hernndez E.
No firma la Ministra Sra. Herreros, no obstante haber concurrido a la vista del recurso y
acuer do del fallo, por estar en comisin de servicios.
700
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Buena fe contractual
C. Concepcin
9. y 10.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
9.- Que la buena fe contractual que exige el artculo 1546 del Cdigo Civil, es aplicable a
todos los contratos desde su etapa precontractual, su escrituracin, ejecucin y trmino
del mismo.
701
10.- Que si se estipul que se debe obtener autorizacin municipal y dentro de la voluntad
de las partes subsisten otras obligaciones que se derivan del contrato y que emanan
precisamente de la naturaleza de la obligacin, son deberes que se entienden
incorporados y por ende se deben cumplir de buena fe por las partes, como lo es en que
para colocar las estructuras donde se instalar el letrero publicitario, el ente municipal
exige autorizacin y la anuencia del dueo de la propiedad y, como tal, tendr que
suscribir la documentacin pertinente para acceder a dicha autorizacin.
REGLA .
a.- Que la buena fe contractual que exige el artculo 1546 del Cdigo Civil, es aplicable a
todos los contratos desde su etapa precontractual, su escrituracin, ejecucin y trmino
del mismo.
4. CITA DE FUENTE.
C. Concepcin, 20 noviembre 2009. M.J. N 22483
Corte Concepcin
Fallo:
702
VISTO:
1.- Que la parte demandada apela de la sentencia definitiva, fundada en que la sentencia
en los considerandos 5 y 6 ha dejado sin aplicacin la ley del contrato en cuanto a que
la duracin y efectos del mismo, se dejaban sujetos a la condicin suspensiva de
obtencin de los permisos necesarios para la instalacin de los letreros publicitarios. Se
seal en la sentencia que al haber pagado la primera renta de arrendamiento sin reserva
o condicin, se habra comprobado que el demandante cumpli con sus obligaciones
contractuales. Por su parte en el considerando 6 como consecuencia de lo indicado en el
considerando 5 concluye que la renta de arrendamiento por los perodos siguientes era
igualmente exigible habiendo por ello su representado incurrido en mora. Agrega, que sin
embargo la sentencia soslay el hecho de que la obligacin de pagar la renta de
arrendamiento se poda hacer efectiva una vez que se hubieran concedido los permisos
respectivos, por cuanto de lo contrario, resulta evidente que bien poda ocurrir, como lo ha
permitido la sentencia, que el arrendatario se encuentre obligado a pagar la renta de
arrendamiento, no obstante que no se puede explotar el inmueble arrendado, existiendo
un enriquecimiento carente de causa.
2.- Que son hechos no discutidos y establecidos que sirven para dirimir el asunto
sometido a la decisin del tribunal los siguientes:
703
b) Que el contrato tena una duracin de 5 aos, entrando en vigencia el 15 de junio del
ao 2007, y venciendo el 15 de junio del ao 2012.
e.- Que la primera cuota fue cancelada y percibida por el demandante anticipadamente el
11 de marzo de 2008.
704
4.- Que en parte de prueba la parte demandada acompa una copia del recurso de
proteccin presentado el 8 de agosto y el informe evacuado por el demandante, reiterado
este ltimo en esta instancia a fojas 56, donde pidi tener por acompaada copia del
informe evacuado por el demandante en los antecedentes sobre Recurso de Proteccin
seguida entre las mismas partes, la cual se encontraba agregada materialmente en la
audiencia de estilo. Esta Corte tuvo por acompaado el documento.
5.- Que este documento es el que rola a fojas 23, donde el demandante reconoce la
existencia del contrato de arrendamiento, el objeto del arrendamiento, su precio, y que
percibi $500.000., al momento de suscribir el contrato respectivo. Sostiene que en
ninguna de las clusulas del contrato de arrendamiento se pact que el arrendador se
obligaba a suscribir documentos, hacer declaraciones juradas o solicitar permisos
municipales para que la arrendataria pudiera instalar publicidad. 6.- Que esta declaracin
del demandante se encuentra en concordancia con los hechos establecidos en el
fundamento segundo de esta sentencia, debiendo precisar que la condicin suspensiva
para percibir la renta de arrendamiento era un vez obtenidos el permiso por la
Municipalidad de Concepcin.
9.- Que la buena fe contractual que exige el artculo 1546 del Cdigo Civil, es aplicable a
todos los contratos desde su etapa precontractual, su escrituracin, ejecucin y trmino
del mismo.
10.- Que si se estipul que se debe obtener autorizacin municipal y dentro de la voluntad
705
de las partes subsisten otras obligaciones que se derivan del contrato y que emanan
precisamente de la naturaleza de la obligacin, son deberes que se entienden
incorporados y por ende se deben cumplir de buena fe por las partes, como lo es en que
para colocar las estructuras donde se instalar el letrero publicitario, el ente municipal
exige autorizacin y la anuencia del dueo de la propiedad y, como tal, tendr que
suscribir la documentacin pertinente para acceder a dicha autorizacin.
11.- Que es sabido que para obtener este tipo de autorizacin se necesita cumplir con
exigencias normativas de la Ley y Ordenanza General de Urbanismo y Construcciones y
con el Plan Regulador Comunal.
En el mismo artculo y para los efectos de los derechos municipales que se deben pagar
el interesado debe presentar a la Direccin de Obras Municipales entre otros
antecedentes y atingente al caso subjudice, plano que grafique el cumplimiento de las
normas urabansticas del Plan Regulador Comunal. Dicho plano deber ser suscrito por el
propietario del predio donde se efectuar la instalacin y por los profesionales
competentes.
12.- Que el referido artculo determina que la Municipalidad a travs del Plan Regulador
Comunal o el Plan seccional, podr establecer mayores restricciones que las
contempladas en el presente artculo.
706
14.- Que como se puede observar de las normativas relativas a los letreros de publicidad,
son variadas las exigencias que se imponen, que no dependen nicamente de la persona
que arrienda el predio, sino que debe participar el propietario del mismo.
16.- Que, por consiguiente, el demandado no se encuentra obligado a pagar las rentas de
arrendamiento mientras la demandante no cumpla por su parte con firmar los documentos
que se exigen para obtener la autorizacin municipal. Por estos fundamentos, se revoca
la sentencia de diecisis de abril de dos mil nueve, escrita de fojas 38 a 40, que dio lugar
a la demanda y declar terminado el contrato de arrendamiento entre las partes y
ordenaba restituir el inmueble, pagar la cuota de renta anual y las que se devenguen
hasta la restitucin del inmueble, y en su lugar se declara que sta queda rechazada en
todas su partes.
Regstrese y devulvase.
707
Rol N724-2009.
708
Tema Clave
Interpretacin
Contrato.
Tribunal
del C. Santiago
Considerando
19.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
19) Que los antecedentes analizados permiten sobradamente calificar como una
compraventa por orden el contrato celebrado por las partes. En la interpretacin de los
contratos debe estarse ms a la intencin de los contratantes que a lo literal de las
palabras y que la calificacin de los mismos no depende de la denominacin que les
hayan dado los interesados sino a su naturaleza intrnseca y de la concurrencia de los
requisitos que le son propios por la ley o la costumbre; y es indudable que en el contrato
materia de la controversia se han reunido los requisitos de la venta por orden, a saber: a)
la venta se hace mediante la orden dada por el demandado al demandante; b) la cosa
objeto del contrato no era conocida por el comprador al tiempo de la celebracin del
contrato; c) ha habido envo de la cosa vendida al comprador; y d) la misma cosa ha sido
examinada o conocida por el comprador con posterioridad a ese envo (artculo 134 del
Cdigo de Comercio).
709
REGLA .
a.- En la interpretacin de los contratos debe estarse ms a la intencin de los
contratantes que a lo literal de las pablaras, siendo la calificacin jurdica de un contrato
independiente de la denominacin que le puedan haber dado las partes, estndose ms a
su naturaleza intrnseca y a la concurrencia de los requisitos que le son propios por la ley
o la costumbre.
4. CITA DE FUENTE.
C. Santiago, 25 noviembre 2009. M.J. N 22345
Corte Suprema
Fallo:
Vistos:
Se reproduce la sentencia en alzada de fecha catorce de julio de dos mil ocho, escrita a
fojas quinientas veintisis y siguientes, con excepcin de sus considerandos vigsimo
segundo; vigsimo tercero, y prrafo final del considerando trigsimo cuarto, que se
eliminan.
710
Enfatiza diciendo que el artculo 1546, seala que los contratos deben cumplirse de buena
fe, situacin que claramente viol el actor al haber omitido antecedentes sobre el cemento
y sus envases, al haber cargado el barco de la manera que lo hizo, al haber "botado" la
mercaderas en cada puerto y al dilatar el certificado para desaduanar la mercadera, que
incluso arroj un informe sobre la mala calidad del cemento entregado.
c.- restituir la cantidad de US$ 150.000 recibida como parte del precio y pagar las costas
712
de la causa;
a.- que ambas partes estn contestes en que existi un contrato de compraventa entre
Allied Maritime e Interpetrol por la cantidad de 15.251,38 toneladas de cemento Prtland
T-1.
b.- que ambas partes estn contestes que la demandante reconvencional y compradora
pag una parte del precio de la compraventa ascendente a US$ 150.000.
d.- que existe un procedimiento de reclamo que no fue utilizado por la vendedora, cual es,
reclamar dentro de los 8 das siguientes al recibo de las facturas, las cuales se entienden
irrevocablemente aceptadas.
e.- que si descarg errneamente del barco los sacos de cemento, es su responsabilidad,
prueba de ello es que otros compradores vendieron a su entera conformidad el cemento
que vena en el mismo embarque.
7) Que la compraventa es un contrato bilateral en que una de las partes se obliga a dar
una cosa y la otra a pagarla en dinero, llamndose precio el dinero que el comprador da
por la cosa vendida;
8) Que de esta definicin de la ley resulta que los efectos del contrato de compraventa
son los derechos y obligaciones que genera para las partes contratantes. Como el
contrato es bilateral, ambas partes contraen obligaciones recprocas: dar el vendedor la
cosa y pagar el precio el comprador. Tales son las obligaciones de la esencia del contrato;
sin ellas no hay contrato o existe uno diverso. Sin necesidad de una estipulacin expresa,
las partes contraen otras obligaciones; por ejemplo, el vendedor est obligado al
saneamiento de la eviccin y de los vicios redhibitorios. Por medio de una estipulacin
expresa, las partes pueden imponerse toda suerte de obligaciones accidentales;
9) Que, en relacin a la calificacin jurdica del contrato, ambos litigantes estn contestes
en que se trata de un contrato de compraventa de mercaderas, as lo expres la
demandante en su libelo, como asimismo lo manifest la parte demandada al interponer
demanda reconvencional;
A mayor abundamiento, cabe hacer presente que la alegacin para fundar la excepcin
en estudio, se contradice con la argumentacin de la excepcin del contrato no cumplido,
opuesta en forma subsidiaria y el fundamento de la demanda reconvencional deducida en
este litigio;
14) Que los antecedente recin analizados permiten sobradamente establecer que lo que
se demanda es el cumplimiento de la obligacin del comprador de pagar el precio de la
compraventa. No tiene relevancia lo literal de las palabras para la calificacin de la accin
o la denominacin que le haya dado el litigante, sino que lo que realmente importa es la
naturaleza intrnseca de la pretensin, razn por la cual la referida excepcin debe ser
715
rechazada;
De esta definicin de la ley resulta que los contratos bilaterales imponen obligaciones
recprocas a quienes los celebran, sin que ninguno de los contratantes pueda exigir su
cumplimiento sino en la forma y tiempo debidos y con tal de que por su parte haya
cumplido o se allane a cumplir de igual manera las que a l le correspondan;
calidad de la mercadera y del envoltorio de sta (S.G.S. Qualuty Certificate; Parking List;
TPI Quality certificate; Product specification of Prtland type I)
18) Que, segn la referida probanza, queda claramente establecido que la mercadera
fue entregada al comprador, y que lo que se cuestiona es la calidad del embalaje, que no
hara apta la mercadera para su comercializacin. Sin embargo, ello no produjo perjuicios
a la vendedora, toda vez, que segn la pericia decretada en autos (fojas 462), se pudo
establecer que la mercadera fue recibida por la vendedora, que dicha mercadera de
comercializ, y an ms, su venta gener utilidades para la empresa;
19) Que los antecedentes analizados permiten sobradamente calificar como una
compraventa por orden el contrato celebrado por las partes. En la interpretacin de los
contratos debe estarse ms a la intencin de los contratantes que a lo literal de las
palabras y que la calificacin de los mismos no depende de la denominacin que les
hayan dado los interesados sino a su naturaleza intrnseca y de la concurrencia de los
requisitos que le son propios por la ley o la costumbre; y es indudable que en el contrato
materia de la controversia se han reunido los requisitos de la venta por orden, a saber: a)
la venta se hace mediante la orden dada por el demandado al demandante; b) la cosa
objeto del contrato no era conocida por el comprador al tiempo de la celebracin del
contrato; c) ha habido envo de la cosa vendida al comprador; y d) la misma cosa ha sido
examinada o conocida por el comprador con posterioridad a ese envo (artculo 134 del
Cdigo de Comercio).
Segn la norma del artculo 134 recin citada, cuando la cosa vendida adolece de
defectos de calidad o cantidad, es necesario el reclamo oportuno y formal del comprador;
reclamo que se halla sometido entre otras a las reglas prescritas por el artculo 146 del
Cdigo de Comercio, de cuyo contexto se derivan situaciones diferentes que pueden
enunciarse as: si el vendedor en el acto de la entregar las mercaderas exige al
comprador que las reconozca ntegramente con respecto a su calidad y cantidad, debe
ste reclamar el defecto en el momento mismo de practicar el reconocimiento; y si no lo
practica o practicndolo no reclama en el mismo acto, se entiende renunciado el derecho
a reclamar ulteriormente por defectos de calidad o cantidad; de lo que se sigue que no es
necesario que el reclamo se haga en el acto de la entrega sino que se formule a raz de
practicado el reconocimiento que exige el vendedor; de suerte que si no lo solicita y el
comprador no lo verifica, conserva ste su derecho, siempre que el reclamo lo haga al
examinar la mercadera o, en otros trminos, lo que quiere ese precepto, es que el
reclamo sea simultneo con el reconocimiento;
21) Que, tampoco existen antecedentes que acrediten que el comprador hubiese
reclamado del contenido de la factura dentro del plazo que establece el artculo 160 del
Cdigo de Comercio;
22) Que, en estas condiciones, no puede ser acogida la excepcin del contrato no
cumplido, en razn que no se encuentra acreditado en el proceso que el vendedor se
hubiere constituido en mora;
23) Que, por ltimo, en subsidio de las anteriores, opuso la excepcin de compensacin
de toda suma de dinero que se le condene a pagar a la actora, con las sumas de dinero
ya entregadas como anticipo, adems de las que se acredite que ella le adeuda, y que
resulte de la accin reconvencional interpuesta en estos autos;
24) Que, a fojas 54 consta copia simple de comunicacin emitida por "Monex Agencia de
Valores S.A.", que da cuenta de abono de US$ 150.000 efectuado por Interpetrol S.A.
respecto de la Orden de Compra N 00995, de fecha 14 de noviembre de 2002.;
deducir la suma de US$ 150.000 que corresponde a parte del precio pagado por la
compradora con anterioridad, quedando en consecuencia la suma lquida a pagar de US$
894.719,53.
29) Que, la demandada reconvencional, al contestar la demanda expresa que las partes
estn contestes en que entre los litigantes existi un contratos de compraventa; que
Interpetrol pag parte del precio ascendente a US$ 150.000; que cumpli con su
obligacin de entregar los sacos de cemento a bordo de la nave en puerto de destino; que
la mercadera fue recibida por el comprador, que el comprador no reclam sobre la
cantidad y calidad de las mercaderas; que se entregaron todos los certificados
internacionales que acreditaban la calidad del producto y el envase de stos y solicita el
rechazo, con costas;
30) Que, ambos litigantes con el fin de acreditar sus pretensiones acompaaron prueba
documental, testimonial y confesional, referida en los considerandos vigsimo sptimo,
vigsimo octavo, vigsimo noveno, trigsimo, trigsimo primero y trigsimo segundo;
31) Que en cuanto a los perjuicios, los atribuye la demandante a la descuidada estiba de
la carga y del deficiente envase, con sacos de cemento rotos, otros desarmados, con
eslingas desordenadas, haciendo una descarga en menor tiempo del requerido para
ahorrar gastos de puerto, que los oblig a pagar costos extras para ordenar la
mercadera, volver a cargarla para dejarla en bodega, el arriendo de la bodega, la
reparacin de los sacos para poder llevarlos al examen del IDIEM, y lo ms grave el
informe negativo luego de ms de dos meses de espera en puerto para recibirlo, por no
haber cumplido e vendedor con la obligacin de certificacin;
719
32) Que, la prueba aportada por el demandante reconvencional, si bien da cuenta de que
el envase que contena el cemento no cumpla con las normas de calidad exigidas para
este tipo de productos, no se acredit la existencia de perjuicios en el patrimonio del
demandante, por el contrario, segn el peritaje de fojas 462, la venta de los productos
generaron utilidades a la empresa. Tampoco la parte demandada logr acreditar los otros
tipos de perjuicios demandado, como daos en su imagen, no pago de proveedores, etc.
Regstrese y notifquese.
NCivil-6643-2008.
Pronunciada por la Sptima Sala de esta Corte de Apelaciones de Santiago, presidida por
la Ministro seor Cornelio Villarroel Ramrez e integrada por el Ministro seor Mauricio
Silva Cancino y el abogado integrante seor Jorge Lagos Gatica. No firma el Ministro
seor Villaroel, no obstante haber concurrido a la vista y acuerdo del fallo, por encontrarse
ausente.
720
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Contratos Innominados.
C. Suprema
3 y 7.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
TERCERO: Que la resolucin recurrida entiende que "el contrato de arrendamiento de
unas mquinas bajo la modalidad de renta por horas de uso con el operador de la misma,
dependiente del arrendador, reviste caractersticas propias y especiales que es necesario
tener presente a la hora de determinar su naturaleza jurdica". As lo expresa la reflexin
primera del veredicto de segunda instancia que, adems, formula otras cavilaciones que
721
Si bien esta calificacin jurdica constituye una apreciacin del jurisdicente susceptible de
ser cuestionada en casacin, para comprobar la ocurrencia de un eventual error de
derecho en este punto habra sido necesario desvirtuar cada uno de los fundamentos que
condujeron a los jueces del fondo para concluir en la caracterizacin a que arribaron,
impugnacin que el ocurrente no realiz, lo que obsta a la posibilidad de modificar la
apreciacin por ellos alcanzada acerca de la naturaleza de la relacin jurdica contractual
de que se trata.
REGLA .
a.- La calificacin jurdica de contrato innominado atribuida por el sentenciador a la
convencin de que se trata, se alcanz al cabo de una ponderacin de sus elementos de
hecho concurrentes, la que se vertebra a partir de supuestos claramente establecidos en
el proceso, como la circunstancia de que la mquina objeto del contrato slo poda ser
"manejada por un operador especializado que pone el mismo arrendador, quien le paga
su salario" (consid. 2); que "en la confeccin de obra, es el artfice que la realiza bajo su
722
atencin, cuidado y riesgo, bajo una renta o precio fijo" (consid. 3); que el operador
adjunto de la mquina "no es empleado del arrendatario sino del arrendador" (consid. 4);
que "como la mquina no ha dejado de estar bajo el dominio del arrendador ni uso del
operador, el riesgo y mantencin de la misma son suyos" (consid. 5); que "este tipo de
contrato termina cuando ya no hay ms horas que trabajar y el arrendatario no est
obligado al pago de la renta sino por las horas marcadas por el hormetro y hasta el
tiempo convenido, poca en que el arrendador retira su mquina" (consid. 6); "que el
trmino del contrato lo dieron las partes, no por la prdida de la mquina, sino cuando por
aplicacin propia sustituyeron la mquina en panne por otra en estado de servir" (consid.
7).
Si bien esta calificacin jurdica constituye una apreciacin del jurisdicente susceptible de
ser cuestionada en casacin, para comprobar la ocurrencia de un eventual error de
derecho en este punto habra sido necesario desvirtuar cada uno de los fundamentos que
condujeron a los jueces del fondo para concluir en la caracterizacin a que arribaron,
impugnacin que el ocurrente no realiz, lo que obsta a la posibilidad de modificar la
apreciacin por ellos alcanzada acerca de la naturaleza de la relacin jurdica contractual
de que se trata.
4. CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 02 diciembre 2009. M.J. N 22508
Corte Suprema
Fallo:
Vistos:
En estos autos Rol N 4631-2001, del Vigsimo Quinto Juzgado Civil de Santiago, juicio
723
sumario, caratulados "Burger Rojas Ral Ernesto con Consorcio Febrag S.A.", don Ral
Ernesto Burger Rojas deduce de terminacin de contrato de arrendamiento por
destruccin de la especie dada en arrendamiento, con indemnizacin de perjuicios en
contra de la sociedad Consorcio Febrag S.A., representada por don Gerardo Moreno
Muoz, solicitando se condene a la sociedad demandada al pago de: a) $ 82.000.000.por concepto de valor de la mquina destruida en poder y bajo responsabilidad del
arrendatario, ms intereses y reajustes que correspondan; b) la suma de $ 3.500.000.mensuales, por concepto de legtimas ganancias de las que se vi privado al perecer la
mquina dada en arriendo por los perodos que se devenguen desde la destruccin de la
especie dada en arrendamiento y su consecuente pago. En el primer otros deduce
demanda de indemnizacin de perjuicios por dao emergente y lucro cesante, como
consecuencia de la prdida total de la mquina dada en arriendo, por las prdidas de las
ganancias que legtimamente le corresponden y prdida de fuente de trabajo para el
arrendador y los trabajadores. Estima el dao emergente en $82.000.000.- y el lucro
cesante en $ 3.500.000.- A ttulo de dao moral demanda la cantidad de $ 30.000.000.-
Aade que el 21 de marzo de 2001 dio en arriendo a la demandada, por el perodo de dos
meses contados desde la entrega en la suma de $ 33.000.- por horas ms IVA., con un
mnimo de 189 horas y como valor adicional a las 189 horas, la suma de $ 28.000.- ms
IVA. Explica que la mquina arrendada cumplira funciones en un lugar aledao a la
represa Ralco, tarea encomendada por Endesa a la demandada Consorcio Febrag S.A.
como contratista directo de la ingeniera y construccin del proyecto y que arrend la
mquina descrita a fin de realizar trabajos en una represa de tierra provisoria de
proteccin en la boca del tnel de desviacin, que se encuentra aguas arriba de la
represa definitiva, resultando que las aguas contenidas se desvan a travs de un tnel
mediante el cual se evacuan dichas aguas debajo de la represa definitiva.
Ese mismo da la mquina present problemas mecnicos por lo que procedi a retirar el
motor y enviarlo a Santiago para ser reparado por el operador Roberto Salgado Parra.
724
Asevera, que de haber avisado con la debida antelacin y no a las 14:00 horas, se habra
impedido la destruccin de la mquina.
Aade que a fines de abril la empresa Burger envi a la faena una gra marca P&H
modelo S-35 con sus correspondiente operador especializado, quien desarroll las
labores a partir del 29 de abril y hasta el 9 de mayo, fecha en que qued en panne, motivo
por el cual la misma empresa Burger le hizo extraer el motor y enviarlo a reparar a
Santiago, suspendiendo entretanto la ejecucin de los trabajos y dejando la gra - sin
motor y adherida al suelo - en el mismo sitio en que haba estado trabajando. Seala que
7 das ms tarde - el 16 de mayo de 2001- la empresa Burger reanud los trabajados
suspendidos con una nueva gra, marca Krupp modelo KS-35, que envi a la faena con
su correspondiente operador especializado con este preciso objeto, en reemplazo de la
anterior, trabajos que continuaron ejecutndose con la nueva gra hasta el 27 de mayo,
fecha en la que fue evacuada de lugar del trabajo y puesta a resguardo en un sitio
suficientemente alto, debido a la violenta crecida de las aguas del ro Bo Bo, motivada
por las lluvias torrenciales con altas temperaturas en la alta cordillera, fenmeno que
provoc que en las ltimas horas de ese mismo da las aguas sobrepasan y destruyeran
parcialmente la atagua de aguas arriba, dos puentes y los caminos de acceso all
existentes.
Debido a los graves daos causados por dicho siniestro, las obras del contrato debieron
paralizarse y replantearse ntegramente conforme a un nuevo programa de ejecucin y la
demandada, entretanto, hubo de abocarse exclusivamente a la reconstruccin de las
obras destruidas, por lo cual el 31 de mayo de 2001, comunic a la demandante el
trmino anticipado del subcontrato, por fuerza mayor, y el consiguiente retiro de la gra
"segunda y operador que estaba en actividad, lo que dicha empresa acept sin reservas.
Dice que se hicieron intentos de remover y trasladar la primera gra, que estaba
726
abandonada all desde 18 das, lo que result infructuoso, pues sta, de 35 toneladas, se
haba dejado suspendida sobre sus patas hidrulicas, esto es, inmovilizada y virtualmente
adherida al suelo al enterrarse en l y sin motor, lo que impidi accionar las patas
hidrulicas para que otra mquina pudiese remolcarla.
En cuanto a la precaucin de asegurar los bienes, sta recae sobre el dueo; por lo
dems, ningn seguro habra operado por grave infraccin del asegurado a sus deberes,
al dejar abandonada la gra por 18 das.
Mediante sentencia de cuatro de marzo de dos mil cuatro, escrita a fojas 250, la jueza
titular del aludido tribunal acogi la demanda slo en cuanto declar terminado el contrato
que vincul a las partes por prdida total de la especie objeto del mismo, acaecida el 27
727
En actor interpuso recurso de apelacin en contra del referido fallo y una de las Salas de
la Corte de Apelaciones de Santiago, mediante sentencia de seis de mayo de dos mil
ocho, que se lee a fojas 350, lo revoc en cuanto declara terminado el contrato por
prdida de la especie y en su lugar rechaz la demanda de fojas uno en todas sus partes.
Considerando:
Explica que se infringi el artculo 1560 del Cdigo Civil, al estimar que el contrato
celebrado entre don Ral Burger Rojas y la sociedad Consorcio Febrag S.A. tiene la
calidad de un contrato innominado consistente en un contrato de servicio de proveer el
uso de una mquina con un operador y en esa virtud consider aplicables las normas del
Cdigo Civil que regulan el contrato de arrendamiento de cosas, declarando en
consecuencia que la terminacin del contrato de arrendamiento de cosas por prdida de
la especie arrendada por culpa del arrendamiento es improcedente y con ello rechaza la
accin ejercida por la demandante y la indemnizacin de perjuicios.
En segundo trmino arguye que, aun siguiendo la tesis de los sentenciadores, en cuanto
a que se tratara de un contrato innominado, tambin se yerra al aplicar el estatuto civil de
un contrato de arrendamiento de servicios previsto en el artculo 1915 del Cdigo Civil y
no el artculo 1916, puesto que la sentencia censurada bajo la premisa de haber concluido
que estbamos en presencia de un contrato innominado, debi aplicar la legislacin que
regulaba el contrato ms similar, que evidentemente no era otro que el contrato de
arrendamiento de cosas, y en esa virtud arribar a la conclusin condigna con la aplicacin
del artculo 1950, N 1 del Cdigo Civil y por ende, declarar la expiracin del contrato de
arrendamiento de cosa, con indemnizacin de perjuicios.
729
c.- El 16 de mayo de 2001 entr a operar una segunda mquina gra, enviada por el
demandante en reemplazo de aqulla averiada y sin motor, pero que es de una capacidad
mayor -50 toneladas- y de un modelo o marca distinta, "Krupp", y con un operador
diferente, hasta el 31 de mayo de 2001, fecha en la que es retirada de la faena por
motivos de fuerza mayor, segn le comunic la demandada a la actora, por carta que en
fax acompa la propia demandante;
d.- El da 27 de mayo de 2001, a las 14:00 horas, el demandado orden retirar toda la
maquinaria del sector de la faena, atendida la crecida que haba experimentado el ro;
e.- El mismo da 27 de mayo la atagua de construccin fue sobrepasada por las aguas
del ro B o-Bo, debido a la gran crecida que ste experiment;
f.- La mquina "en panne" no fue retirada del lugar donde se encontraba, de modo que al
romperse la represa provisoria ella fue arrastrada por las aguas del ro, desconocindose
hasta la fecha su paradero;
Estas consideraciones son suficientes para desestimar tal supuesto error de derecho.
QUINTO: Que, acto seguido, se razona en el sentido que "en un segundo escenario" y
aun de ser correcta la tesis del fallo en orden a estar en presencia de un contrato
innominado, igualmente ha debido apreciarse como vulnerado el artculo 1.560 "y
siguientes" y en especial el artculo 1.563 del mismo cuerpo sustantivo, el que se
reproduce, sin ms puntualizaciones, para "arribar a la misma conclusin en cuanto a la
plena aplicacin del artculo 1.950 N 1 del Cdigo Civil y por ende declarar la expiracin
del contrato de arrendamiento de cosas, con indemnizacin de perjuicios".
SEXTO: Que la jurisprudencia de esta misma Corte ha sido reiterativa para declarar que
un recurso como el que nos ocupa no admite la incorporacin de planteamientos
subsidiarios o alternativos, que implican un razonamiento contradictorio, en la medida que
la infraccin sustancial de ley que se predica positivamente en la proposicin inicial del
silogismo, se opone a la construccin mental hipottica que se formula en la versin
alternativa. Tal situacin se contrapone con la naturaleza de derecho estricto del recurso
de casacin en el fondo e impide que ste pueda prosperar, en lo que dice relacin con la
alegacin subsidiaria.
Si bien esta calificacin jurdica constituye una apreciacin del jurisdicente susceptible de
ser cuestionada en casacin, para comprobar la ocurrencia de un eventual error de
derecho en este punto habra sido necesario desvirtuar cada uno de los fundamentos que
condujeron a los jueces del fondo para concluir en la caracterizacin a que arribaron,
impugnacin que el ocurrente no realiz, lo que obsta a la posibilidad de modificar la
apreciacin por ellos alcanzada acerca de la naturaleza de la relacin jurdica contractual
de que se trata.
732
NOVENO: Que, adems, el arbitrio examinado cita como vulnerado " entre otros - el
artculo 44 del Cdigo Civil, relativo a las especies de culpa concurrentes en las hiptesis
de responsabilidad contractual, pero, adems de no reflexionar sobre la forma en que se
habra producido su transgresin, no se hace cargo de la afirmacin de la sentencia en
orden a que la "negligencia fue del mismo arrendador, que no retir su mquina de la
zona que era peligrosa, sabiendo el riesgo por estar en el sector de trnsito de las aguas"
(considerando 8). Para que esta alegacin fuera admisible, la recurrente debi desvirtuar
su fundamento fctico, lo que importaba cuestionar las reglas reguladoras de la prueba, a
travs de las cuales se lo tuvo por establecido, lo que no ocurri.
Por esta consideraciones, y visto, adems, lo dispuesto en los artculos 765 y 767 del
Cdigo de Procedimiento Civil, se rechaza, con costas, el recurso de casacin en el fondo
deducido a fojas 352 por la parte de don Ral Ernesto Burger Rojas, en contra de la
sentencia definitiva de seis de mayo de dos mil ocho, escrita a fojas 350.
733
Regstrese y devulvase.
Rol N 3710-08.
Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema por los Ministros Sres. Milton Juica
A., Sergio Muoz G. y Guillermo Silva G. y Abogados Integrantes Sra. Maricruz Gmez de
la Torre V. y Sr. Domingo Hernndez E.
734
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Fuerza.
C. Santiago
6. y 7.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
6) Que para que la fuerza vicie el consentimiento, dice el artculo 1456 del Cdigo Civil,
es menester que sea capaz de producir una impresin fuerte en una persona de sano
juicio, tomando en cuenta su edad, sexo y condicin, mirndose como una fuerza de este
tipo todo acto que infunde a una persona un justo temor de verse expuesta ella, su
consorte o alguno de sus ascendientes o descendientes a un mal irreparable y grave.
Agrega la citada disposicin que el temor reverencial, esto es, el solo temor de
desagradar las personas a quienes se les debe sumisin y respeto, no basta para viciar el
consentimiento. La fuerza puede ser material o moral, habindose alegado por el actor
esta ltima, al denunciar una suerte de presin de su jefe y del abogado de la empresa
para firmar la renuncia.
7) Que claramente no ha habido fuerza alguna que haya podido viciar la voluntad del
demandante. Se ha dicho que para que la fuerza vicie el consentimiento es menester que
735
Que sea determinante implica que haya sido ejercida precisamente con el objeto de
obtener la declaracin de voluntad del demandante, lo que no est probado en el proceso,
pues el propio actor seala en su demanda que su jefe y el abogado de la empresa "le
pidieron la renuncia" por la denuncia de acoso sexual que haba sido presentada en su
contra, peticin que l pudo aceptar o rechazar y nunca estuvo en situacin tal que por la
presin ejercida no haya tenido otra posibilidad que firmar su renuncia y, por cierto, an
aceptando que le hayan dicho que la situacin iba a resultar incmoda para su novia
embarazada, ello tampoco implica una presin que necesariamente haya determinado al
actor a firmar su renuncia. Es indiferente para estos efectos si el actor estaba nervioso o
alterado, lo que realmente importa es saber si se ejerci sobre l una fuerza moral que lo
haya impelido a firmar el documento y la respuesta no puede ser sino negativa: siempre
estuvo en condiciones el demandante de no hacerlo, de no firmar.
Que sea grave, tratndose de fuerza moral, significa que se debe amenazar con un mal
que produzca aquella impresin de que trata el artculo 1456 del Cdigo Civil, lo que
difcilmente puede haber sucedido en el caso sub lite, pues el actor es una persona
adulta, de 29 aos de edad a la fecha del despido (naci el 8 de septiembre de 1977,
como consta de la copia del carn de fojas 34) y en su sano juicio.
Que sea injusta significa que la amenaza debe consistir en medios ilcitos. As, como el
empleador siempre pudo despedir al actor, pues este es un derecho de aqul
(independiente que tal despido sea o no justificado) y suponiendo que se lo haya
amenazado con el despido por el pretendido acoso sexual, ello no es ilegtimo sino
precisamente lo contrario: se habra advertido al actor que la empresa estaba dispuesta a
considerar esa posibilidad, la que la ley le otorga. Bien pudo el demandante rechazar la
peticin de renuncia y esperar la respuesta de su empleador quien, si decida despedirlo
por la causal de la letra b) del N 1 del artculo 160 del Cdigo del Trabajo, le asista al
trabajador el derecho de demandar la injustificacin de tal despido y el pago de las
indemnizaciones correspondientes. Y, por cierto, se reitera, la empresa siempre pudo
despedir al actor, haya o no dado cumplimiento a las normas de los artculos 211-A a 211E del mismo cuerpo laboral y una cosa muy distinta es que tal despido haya podido ser
declarado injustificado.
REGLA .
a.- Que la fuerza sea determinante implica que haya sido ejercida precisamente con el
736
b.- Que la fuerza sea grave, tratndose de fuerza moral, significa que se debe amenazar
con un mal que produzca aquella impresin de que trata el artculo 1456 del Cdigo Civil.
No reviste gravedad la peticin de renuncia por una denuncia de acoso sexual que haba
sido presentada en contra del actor, pues es una persona adulta, de 29 aos de edad a la
fecha del despido y en su sano juicio.
c.- Que la fuerza sea injusta significa que la amenaza debe consistir en medios ilcitos.
As, como el empleador siempre pudo despedir al actor, pues este es un derecho de aqul
(independiente que tal despido sea o no justificado) y suponiendo que se lo haya
amenazado con el despido por el pretendido acoso sexual, ello no es ilegtimo sino
precisamente lo contrario: se habra advertido al actor que la empresa estaba dispuesta a
considerar esa posibilidad, la que la ley le otorga. Bien pudo el demandante rechazar la
peticin de renuncia y esperar la respuesta de su empleador quien, si decida despedirlo
por la causal de la letra b) del N 1 del artculo 160 del Cdigo del Trabajo, le asista al
trabajador el derecho de demandar la injustificacin de tal despido y el pago de las
indemnizaciones correspondientes. Y, por cierto, se reitera, la empresa siempre pudo
despedir al actor, haya o no dado cumplimiento a las normas de los artculos 211-A a 211E del mismo cuerpo laboral y una cosa muy distinta es que tal despido haya podido ser
declarado injustificado.
4. CITA DE FUENTE.
C. Santiago, 16 diciembre 2009. M.J. N 22599
737
Corte Santiago
Fallo:
VISTOS:
1) Que consta del proceso y, por lo dems, aparece reconocido en la demanda, que el
actor firm la renuncia voluntaria que se agreg en copia a fojas 57, sosteniendo en su
libelo de fojas 1 dos hechos respecto de este instrumento:
b) que suscribi tal instrumento presionado por su jefe directo seor Jos Villarroel y por
el abogado de la empresa don Octavio Castro Soto, quienes le sealaron que doa Gisela
Valderrama haba presentado una denuncia de acoso sexual en su contra por unos
mensajes de texto que l le haba enviado y que poda ser despedido por ello.
2) Que de acuerdo al artculo 177 del Cdigo del Trabajo, la renuncia debe constar por
escrito, requisito que en la especie se cumple, agregando la norma que no puede ser
invocado por el empleador el instrumento que contiene la renuncia si no ha sido firmado
738
por el interesado y por el presidente del sindicato o el delegado del personal o sindical
respectivos, o que no fuere ratificado ante el inspector del trabajo o ante un notario o ante
el oficial del registro civil de la respectiva comuna o ante el secretario municipal
correspondiente.
3) Que la aludida renuncia de fojas 57, fue firmada y luego ratificada por el demandante
ante el Notario Pblico don Rubn Galecio Gmez, de suerte que el actor debe demostrar
que la afirmacin hecha por este Ministro de Fe es falsa y que l jams ratific su firma
ante l.
4) Que ninguna prueba hay en autos que pueda convencer a la Corte en tal sentido. En
efecto, los documentos de fojas 26 y 34, consistentes en un certificado del registro civil de
extravo de una cdula del actor y de una copia de dicho carn, actualmente vigente, en
nada cambia el hecho que un Ministro de Fe afirm que el actor ratific su firma puesta
por l en el instrumento de fojas 57. Cabe sealar que el demandante cit como testigo de
su parte al seor Notario Galecio pero a fojas 101 expresamente renunci a presentarlo. Y
en cuanto a la testimonial de su parte, el seor Jos Villarroel Figueroa, a fojas 89, quien
fuera jefe del trabajador demandante, sostiene que ste firm la carta renuncia en su
oficina, lo que no obsta que al da siguiente fuera a ratificar su firma ante el aludido
Notario. De hecho, as lo sostiene doa Ivette Maureira Varela, a fojas 96, testigo
presentada por la demandada, quien refiere precisamente que el actor concurri al da
siguiente de la renuncia a la Notara a ratificarla.
5) Que aclarado lo anterior, esto es, que la renuncia de fojas 57 cumple con las
exigencias del artculo 177 del Cdigo del Trabajo, debe el tribunal pronunciarse acerca
de su validez, toda vez que el demandante ha sostenido que su voluntad de renunciar
est viciada por la fuerza ejercida por la sociedad demandad en su contra.
6) Que para que la fuerza vicie el consentimiento, dice el artculo 1456 del Cdigo Civil,
es menester que sea capaz de producir una impresin fuerte en una persona de sano
juicio, tomando en cuenta su edad, sexo y condicin, mirndose como una fuerza de este
tipo todo acto que infunde a una persona un justo temor de verse expuesta ella, su
consorte o alguno de sus ascendientes o descendientes a un mal irreparable y grave.
Agrega la citada disposicin que el temor reverencial, esto es, el solo temor de
desagradar las personas a quienes se les debe sumisin y respeto, no basta para viciar el
consentimiento. La fuerza puede ser material o moral, habindose alegado por el actor
esta ltima, al denunciar una suerte de presin de su jefe y del abogado de la empresa
para firmar la renuncia.
739
7) Que claramente no ha habido fuerza alguna que haya podido viciar la voluntad del
demandante. Se ha dicho que para que la fuerza vicie el consentimiento es menester que
sea determinante, grave e injusta.
Que sea determinante implica que haya sido ejercida precisamente con el objeto de
obtener la declaracin de voluntad del demandante, lo que no est probado en el proceso,
pues el propio actor seala en su demanda que su jefe y el abogado de la empresa "le
pidieron la renuncia" por la denuncia de acoso sexual que haba sido presentada en su
contra, peticin que l pudo aceptar o rechazar y nunca estuvo en situacin tal que por la
presin ejercida no haya tenido otra posibilidad que firmar su renuncia y, por cierto, an
aceptando que le hayan dicho que la situacin iba a resultar incmoda para su novia
embarazada, ello tampoco implica una presin que necesariamente haya determinado al
actor a firmar su renuncia. Es indiferente para estos efectos si el actor estaba nervioso o
alterado, lo que realmente importa es saber si se ejerci sobre l una fuerza moral que lo
haya impelido a firmar el documento y la respuesta no puede ser sino negativa: siempre
estuvo en condiciones el demandante de no hacerlo, de no firmar.
Que sea grave, tratndose de fuerza moral, significa que se debe amenazar con un mal
que produzca aquella impresin de que trata el artculo 1456 del Cdigo Civil, lo que
difcilmente puede haber sucedido en el caso sub lite, pues el actor es una persona
adulta, de 29 aos de edad a la fecha del despido (naci el 8 de septiembre de 1977,
como consta de la copia del carn de fojas 34) y en su sano juicio.
Que sea injusta significa que la amenaza debe consistir en medios ilcitos. As, como el
empleador siempre pudo despedir al actor, pues este es un derecho de aqul
(independiente que tal despido sea o no justificado) y suponiendo que se lo haya
amenazado con el despido por el pretendido acoso sexual, ello no es ilegtimo sino
precisamente lo contrario: se habra advertido al actor que la empresa estaba dispuesta a
considerar esa posibilidad, la que la ley le otorga. Bien pudo el demandante rechazar la
peticin de renuncia y esperar la respuesta de su empleador quien, si decida despedirlo
por la causal de la letra b) del N 1 del artculo 160 del Cdigo del Trabajo, le asista al
trabajador el derecho de demandar la injustificacin de tal despido y el pago de las
indemnizaciones correspondientes. Y, por cierto, se reitera, la empresa siempre pudo
despedir al actor, haya o no dado cumplimiento a las normas de los artculos 211-A a 211E del mismo cuerpo laboral y una cosa muy distinta es que tal despido haya podido ser
declarado injustificado.
740
9) Que al existir una renuncia voluntaria que cumple con todas las exigencias legales y
que no es nula, no ha habido despido y, en consecuencia, la demanda debe rechazarse.
Y visto, adems, lo dispuesto en el artculo 463 del Cdigo del Trabajo, se revoca la
sentencia de veintisis de noviembre de dos mil ocho, escrita de fojas 106 a 120, y en su
lugar se decide que la demanda de fojas 1 queda rechazada en todas sus partes, sin
costas por haber tenido el actor motivos plausibles para litigar.
Acordada con el voto en contra de la Abogado Integrante seora Montt, quien estuvo por
confirmar la sentencia en alzada, teniendo presente, adems de los fundamentos del fallo
de primer grado, los siguientes:
A) Que constituye una fuerza determinante, grave e injusta la presin moral ejercida por
los personeros de la sociedad demandad en contra del actor pues le imputaron una
conducta de acoso sexual y lo amenazaron con despedirlo sin cumplir con la investigacin
previa de acuerdo a lo que disponen los artculos 211-A, 211-B, 211-C, 211-D, 211-E del
Cdigo Laboral.
C) Que la nica conducta lcita que pudo desplegar la empresa fue sealarle al actor que
frente a la denuncia que supuestamente exista en su contra, se iba a iniciar la
investigacin correspondiente de acuerdo a las disposiciones legales citadas y, por ende,
cualquier amenaza de despido sin haberse hecho tal procedimiento, es injusto y vicia la
voluntad del actor.
D) Que, por otra parte, no se ha acreditado en la causa el hecho de que el actor hubiere
741
estado afiliado al sindicato que presida quien firm conjuntamente con l para legitimar el
acto, ya que al incorporar a la norma del artculo 177, referido en este fallo, el adjetivo
"respectivos", se ha querido dejar por establecido que el trabajador que da garanta de
certeza y de falta de ingerencia de terceros, es aqul que, estando amparado por la
institucin del fuero laboral, puede libremente exigir para uno de sus representados el
respeto de los derechos y el cumplimiento de las obligaciones que se generan al
momento del trmino de la relacin laboral.
Regstrese y devulvase.
N 1.688-2009.
742
Tema Clave
Interpretacin
Contrato.
Tribunal
del C. Suprema
Considerando
11, 12, 13 y 14.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
DCIMO PRIMERO: Que respecto a los artculos 19 y 1545 del Cdigo Civil, estos
bsicamente expresan que si la ley o el contrato "elevado por este ltimo artculo a la
743
categora de ley para las partes- son claros en su sentido, no debe desatenderse su tenor
literal a pretexto de consultar su espritu. Este principio ocasiona que la exgesis de la ley
o del contrato se gue primeramente por todo lo dispuesto en forma clara, prstina, sin que
sea necesaria una actividad de interpretacin mayor. Por el contrario, las reglas de
interpretacin tanto de la ley como de los contratos forman un sistema de cascada,
permitiendo un mayor grado de flexibilidad en la interpretacin a medida que el texto o
sentido de la ley y el contrato sean ms o menos oscuros y confusos, y, por el contrario,
sta actividad de interpretacin se ver limitada drsticamente cuando la voluntad de las
partes -en el caso del contrato- ha sido claramente manifestada, en un sentido unvoco, lo
que no da lugar a interpretar la ley o el contrato, sino a aplicarlo.
labor de interpretacin del juzgador se ve claramente limitada a aplicar el artculo 1545 y/o
el 1560 del Cdigo Civil.
REGLA .
a.- Las reglas de interpretacin tanto de la ley como de los contratos forman un sistema
de cascada, permitiendo un mayor grado de flexibilidad en la interpretacin a medida que
el texto o sentido de la ley y el contrato sean ms o menos oscuros y confusos, y, por el
contrario, sta actividad de interpretacin se ver limitada drsticamente cuando la
voluntad de las partes -en el caso del contrato- ha sido claramente manifestada, en un
sentido unvoco, lo que no da lugar a interpretar la ley o el contrato, sino a aplicarlo.
b.- El contrato materia de la litis estableca de forma clara y transparente, cual era el
mecanismo que las partes tenan para ponerle fin, consistente en enviar una carta
certificada a la otra parte manifestndole su intencin de no renovar el contrato, con una
anticipacin mnima de 60 das antes de la fecha de trmino. Por ende, no habindose
acreditado en autos la existencia de dicha comunicacin, no podan los jueces de la
instancia suponer la existencia de una derogacin tcita del contrato, puesto que el
mecanismo de trmino de l estaba inequvocamente establecido en su propio texto,
siendo una ley para las partes y pudiendo ser slo invalidado entonces por su mutuo
consentimiento o por causales legales, que en este caso estaban determinadas en el
mismo contrato, sin que ellas se produjeran.
4. CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 29 Diciembre 2009. M.J. N 22714
745
Corte Suprema
Fallo:
VISTOS:
En estos autos arbitrales seguidos ante el Juez Arbitro don Ricardo Abuauad Dagach,
juicio de terminacin de contrato de seguro y de cobro de pesos, caratulado
"Administradora de Fondos de Pensiones Magister S.A. con Renta Nacional Compaa de
Seguros de Vida S.A.", el seor juez rbitro, por sentencia escrita a fojas 305, de dos de
diciembre de dos mil dos, acogi la demanda en cuanto declara terminado el contrato de
seguro suscrito por la demandante Administradora de Fondos de Pensiones Magister S.A.
y la demandada Renta Nacional Compaa de Seguros de Vida S.A. y condena a esta
ltima al pago de la suma equivalente a treinta y cuatro mil trescientos setenta y seis
unidades de fomento (34.376 U.F.) segn el valor de esta unidad a la poca en que ello
se produzca por concepto de excedentes adeudados a la demandante una vez practicado
por el sentenciador el ajuste definitivo previsto por la clusula dcima, numeral quinto, del
contrato referido; ordena, adems, que la suma antes indicada deber ser pagada con
ms los intereses corrientes para operaciones reajustables que fueren procedentes,
determinados entre la fecha en que la sentencia quede ejecutoriada y la fecha en que se
produzca el pago efectivo de la suma adeudada por la demandada; y determina, por
ltimo, que cada parte deber pagar sus costas.
746
Y TENIENDO EN CONSIDERACION:
PRIMERO: Que el actor al deducir el recurso de casacin en el fondo sostiene que el fallo
impugnado ha infringido los artculos 1560, 1545, 19 y 2514 inciso segundo del Cdigo
Civil y artculo 428 del Cdigo de Procedimiento Civil, en relacin con el artculo 342 N 3
del mismo cuerpo legal.
El recurrente explica que la infraccin al artculo 1560 del Cdigo Civil se produce porque
la sentencia impugnada deja sin efecto la aplicacin de una clusula expresa, en la que la
intencin de los contratantes era claramente conocida y la expusieron sin duda ni
ambigedad, en cuanto el contrato de seguro se renovara en forma tcita y sucesiva si
ninguna de las partes manifestaba su intencin de ponerle trmino mediante carta
certificada despachada a la otra con sesenta das de anticipacin al vencimiento del
respectivo perodo. Sin embargo, reclama que los jueces de la instancia, hacen prevalecer
por sobre esta regla de interpretacin, una supuesta convencin tcita emanada de un
contrato diverso en el que en ninguna parte se hace referencia al contrato celebrado con
anterioridad ni menos a su trmino. Aparte de lo anterior, agrega el libelo, la sentencia no
entrega argumentos para justificar este supuesto acuerdo tcito. Destaca que no existe
ningn antecedente probatorio, declaracin, carta, que obre en el juicio que revele la
intencin de las partes de poner trmino a la vigencia de la pliza mediante la suscripcin
de otra.
A continuacin la impugnacin expresa que el artculo 1545 del Cdigo Civil se trasgrede
atendido que los jueces del mrito suponen una forma de terminacin tcita del contrato
de seguro. No obstante, reitera que aquello fue estipulado por las partes en ste y en
esas circunstancias su trmino de modo unilateral y sin sujecin a la formalidad pactada
constituye una violacin de esa ley particular denominada contrato. Asevera que la
sentencia atacada pretende extinguir los efectos de un contrato mediante una forma no
contemplada por la ley cual sera la suscripcin de un contrato diferente que no se refiere
al anterior.
En lo concerniente a la vulneracin del artculo 19 del Cdigo Civil, postula que sta se
747
produce porque se ha desatendido el claro tenor literal del contrato de pliza, que seala
la forma estipulada para ponerle trmino. De este modo, asegura que al desatenderse su
texto se hizo prevalecer una suposicin de derogacin tcita no probada.
Enseguida el impugnador denuncia que se infringi el artculo 2514 inciso segundo del
Cdigo Civil, al resolver los falladores que la accin nacida del contrato se encontraba
prescrita a la fecha de su interposicin, computando un trmino de prescripcin desde un
momento que no corresponda, pues no era la fecha en que se haba hecho exigible.
Explica que de acuerdo al contrato de seguro la obligacin se haca exigible a contar de
los dos aos siguientes al trmino de la vigencia del contrato, pero para que se produjera
dicho trmino se requera enviar la comunicacin en la forma ya sealada.
Hace presente que en contra de dicha probanza no se rindi ninguna otra durante el
juicio. No obstante, la sentencia censurada no considera el mrito de esa prueba y en
cambio prescinde de su contenido haciendo referencia a una suposin acreditada con
medio de prueba alguno, que se desprendera de un contrato diverso. Aade que el hecho
de que la pliza de seguro se renovaba automticamente a menos que se diera aviso por
escrito en contrario por carta certificada despachada a la contraparte antes del
vencimiento del respectivo perodo es una de las clusulas de la escritura pblica en que
consta el contrato. Sin embargo, afirma que erradamente la sentencia concluye que esa
causal de trmino no operaba pues se haba firmado otro contrato posterior. Hace notar
que muy por el contrario, la extensa relacin entre las partes en lo concerniente al
cumplimiento del ajuste final del contrato, refrendada por la nutrida correspondencia, no
hace sino confirmar que jams existi acuerdo, ni expreso ni tcito para ponerle trmino.
Concluye que esta errnea apreciacin de la prueba hace que la sentencia incurra en
748
violacin al artculo 428 del Cdigo de Procedimiento Civil que previene que entre dos
pruebas contradictorias y a falta de ley que resuelva el conflicto los tribunales preferirn la
que crean conforme a la verdad. En la especie, asevera que no hay prueba contradictoria
sobre la forma de trmino del contrato de seguro y adems exista la ley que resolva
perfectamente la forma de su trmino, que es el contrato, por lo que no exista la opcin
de preferir otro antecedente.
a) Que con fecha 13 de julio de 1990 las partes celebraron un contrato de seguros
denominado "Pliza de Seguro de A.F.P. Magster S.A." otorgado mediante escritura
pblica suscrita ante el Notario Pblico de esta ciudad don Kamel Saquel Zaror,
individualizada con el nmero 090-01.
c) Que existieron contratos posteriores entre las mismas partes, de similar naturaleza al
que ha sido materia de la controversia de autos, variando sus perodos de cobertura y
otros elementos de su contenido.
d) Que ninguna de las partes notific a la otra de su decisin de poner fin al contrato
objeto de la litis.
TERCERO: Que, sobre la base de los hechos reseados precedentemente, una sala de la
I. Corte de Apelaciones de Santiago, concluy que la demandante no acredit que la
demandada haya pagado en razn de una obligacin derivada del contrato de seguro
celebrado el 13 de julio de 1990, lo que en su opinin confirma la idea de que a dicho
contrato de seguro se le puso trmino al celebrar un nuevo contrato el 22 de julio de 1992,
por lo cual acogi la excepcin de prescripcin extintiva a favor de la demandada,
revocando la sentencia de primera instancia, rechazando la demanda interpuesta por
A.F.P. Magster S.A.
749
750
OCTAVO: Que el artculo 1560 del Cdigo Civil prescribe "Conocida claramente la
intencin de los contratantes, debe estarse a ella ms que a lo literal de las palabras." La
regla del artculo 1560 es la piedra angular en materia de interpretacin de contratos, es la
regla principal, ""y en consecuencia, si conocida claramente la intencin de los
contratantes, ella es contraria a las restantes disposiciones, el juez debe dar primaca a la
voluntad de las partes. Igualmente, si hay clara disposicin de stas en contrario de ellas,
el juez no podr eludir su aplicacin." (Abeliuk Manasevich, Ren; Las Obligaciones,
Tercera Edicin, 1993, Tomo I, pag.92.)
NOVENO: Que, por otra parte, el artculo 1545 del citado cdigo, dispone, como primer
efecto de las obligaciones, que: "Todo contrato legalmente celebrado es una ley para los
contratantes, y no puede ser invalidado, sino por su consentimiento mutuo o por causas
lega les." Esto significa que el deudor no puede eximirse del cumplimiento literal de la
obligacin, sino por mutuo acuerdo con el acreedor, o por causales legales previstas y
existentes al tiempo de la contratacin. Esta disposicin debe relacionarse forzosamente
con lo preceptuado en el artculo 19 del Cdigo Civil en cuanto a que: "Cuando el sentido
de la ley es claro, no se desatender su tenor litoral, a pretexto de consultar su espritu."
Es as que ""tal es la importancia que el legislador asigna la fuerza obligatoria del
contrato, que declar su categora de ley para las partes, lo cual, an cuando no est
dicho, vale para toda obligacin." (Abeliuk, Ob.Cit., pag.101).
DCIMO: Que el artculo 2514 del Cdigo Civil en su inciso 2 dispone: "Se cuenta este
tiempo desde que la obligacin se hace exigible" y por otra parte, el artculo 428 del
Cdigo de Procedimiento Civil dispone que "Entre dos o ms pruebas contradictorias y a
falta de ley que resuelva el conflicto, los tribunales preferirn la que crean ms conforme
con la verdad". La presunta trasgresin de estos artculos depende directamente de que
en la sentencia se hayan vulnerado o no de los artculos 19, 1545 y 1560, todos del
Cdigo Civil, en una relacin causa-efecto, por lo cual se proceder a analizar estos tres
ltimos.
DCIMO PRIMERO: Que respecto a los artculos 19 y 1545 del Cdigo Civil, estos
bsicamente expresan que si la ley o el contrato "elevado por este ltimo artculo a la
categora de ley para las partes- son claros en su sentido, no debe desatenderse su tenor
literal a pretexto de consultar su espritu. Este principio ocasiona que la exgesis de la ley
o del contrato se gue primeramente por todo lo dispuesto en forma clara, prstina, sin que
sea necesaria una actividad de interpretacin mayor. Por el contrario, las reglas de
interpretacin tanto de la ley como de los contratos forman un sistema de cascada,
permitiendo un mayor grado de flexibilidad en la interpretacin a medida que el texto o
751
el plazo de prescripcin, y del 428 del Cdigo de Procedimiento Civil, en cuanto a pruebas
contradictorias, se ve claramente influido por la aplicacin de los artculos 19, 1545 y 1560
del Cdigo Civil y por lo mismo, si estos hubieran sido bien aplicados a los presupuestos
fcticos, no habra existido ninguna duda en cuanto al plazo desde el cual deba contarse
la prescripcin.
Con lo expuesto, y lo que disponen, adems, los artculos 19, 1545, 1560 y 2514, todos
del Cdigo Civil; y 764, 769, 785 y 805 del Cdigo de Procedimiento Civil, se declara que
SE ACOGE el recurso de casacin en el fondo deducido en lo principal del escrito de fojas
411, y se invalida en todas sus partes la sentencia de seis de junio de dos mil ocho,
escrita a fojas 404 y siguientes.
Regstrese
Rol N 5197-2008
Pronunciado por la Primera Sala de la Excma. Corte Suprema integrada por los Ministros
Sra. Margarita Herreros Martnez, Sr. Juan Araya Elizalde, Sr. Guillermo Silva Gundelach
y los Abogados Integrantes Sr. Benito Mauriz Aymerich y Sr. Arnaldo Gorziglia Balbi. No
753
firman la Ministro Sra. Herreros y el Abogado Integrante Sr. Gorziglia, no obstante haber
estado en la vista y acuerdo de la causa, por estar en comisin de servicios la primera y
ausente el segundo. Santiago, 29 de diciembre de 2.009.
SENTENCIA DE REEMPLAZO
De acuerdo con lo dispuesto en el artculo 785 del Cdigo de Procedimiento Civil, se dicta
la siguiente sentencia de reemplazo.
VISTOS:
PRIMERO: Los motivos octavo a dcimo sptimo inclusive del fallo de casacin que
antecede, que se tienen por expresamente reproducidos.
Por estas consideraciones y lo dispuesto en los artculos 186 y siguientes del Cdigo de
Procedimiento Civil, se confirma la sentencia apelada de dos de diciembre de dos mil dos,
escrita a fojas 306 y siguientes.
El seor juez rbitro dispondr la reconstitucin de la foja 305 y ordenar que se agregue
en forma correlativa a los autos.
Rol N5197-2008
Pronunciado por la Primera Sala de la Excma. Corte Suprema integrada por los Ministros
Sra. Margarita Herreros Martnez, Sr. Juan Araya Elizalde, Sr. Guillermo Silva Gundelach
y los Abogados Integrantes Sr. Benito Mauriz Aymerich y Sr. Arnaldo Gorziglia Balbi. No
firman la Ministro Sra. Herreros y el Abogado Integrante Sr. Gorziglia, no obstante haber
estado en la vista y acuerdo de la causa, por estar en comisin de servicios la primera y
ausente el segundo. Santiago, 29 de diciembre de 2.009.
755
756
Tema Clave
Tribunal
Considerando
Clusula de Aceleracin.
C. Suprema
5.
Buena fe
C. Suprema
6., 7. y 8.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
757
SEGUNDO: Que para la adecuada inteligencia del recurso en estudio, deben tenerse
presente las siguientes circunstancias que dicen relacin con el proceso:
b).- Los dividendos Ns 102 y 103, con vencimiento los das 10 de junio y 10 de julio de
2005, fueron pagados por el deudor con fechas 21 y 25 de julio de 2005,
respectivamente.
e).- El deudor pag, en sus fechas de vencimiento original, los dividendos Ns 104 a 109,
correspondientes a los meses de agosto, septiembre, octubre, noviembre y diciembre de
2005, adems de enero de 2006;
758
QUINTO: Que en relacin al asunto sub lite, aparece importante precisar que el sentido
del establecimiento de una clusula de aceleracin -cualesquiera sean los trminos que
se empleen para ello-, es hacer exigible el total de una obligacin que se paga en cuotas
por el solo hecho de la mora o retardo en el pago ntegro y oportuno de todo o parte de
una de ellas, como si el crdito en su conjunto fuere exigible, aunque no se haya
producido la mora de las restantes parcialidades y ste es el derecho que le asiste al
acreedor, el de poder cobrar el total o saldo insoluto de la obligacin, en el slo evento de
la mora o retardo, an parcial, de alguna de las cuotas en que se dividi el crdito;
SEXTO: Que, del mismo modo, resulta tambin pertinente sealar que el pago es un acto
jurdico bilateral que supone la voluntad de ambas partes, tanto del que paga como del
que recibe y, de esta manera, la sola oferta o consignacin sin declaracin de suficiencia,
por parte del deudor, no puede en caso alguno importar una renuncia al plazo concedido,
ni a la facultad del acreedor de acelerar la deuda, en caso de haberse verificado la
hiptesis que la haca procedente, ya que se requiere, como se ha dicho, acuerdo del
acreedor por tratarse de un acto verificado en beneficio de ambas partes.
De este modo, el pago como acto jurdico para que extinga total o parcialmente la
obligacin requiere manifestacin de voluntad de recibir y por tanto de liberar al deudor,
hecho que en el caso de autos, a la fecha en que se present la demanda, se haba
verificado respecto de los dividendos Ns 102 y 103, tal como fue asentado por los jueces
del mrito en uso de las facultades que les son exclusivas, cuando sealaron que tales
cuotas, con vencimiento los das 10 de junio y 10 de julio de 2005, fueron pagadas por el
deudor con fechas 21 y 25 de julio de 2005, respectivamente, esto es, con antelacin a la
presentacin de la demanda, hecho acontecido el 3 de agosto de 2008, debiendo,
asimismo, considerarse que el dividendo N 104 correspondiente al mes de agosto y los
posteriores, fueron pagados en sus fechas de vencimiento original, otorgando el Banco
ejecutante en cada caso los correspondientes recibos que daban cuenta de la aceptacin
y consentimiento en la satisfaccin de tales parcialidades;
SEPTIMO: Que conforme previene el artculo 12 del Cdigo Civil: "Podrn renunciarse los
derechos conferidos por las leyes, con tal que slo miren al inters individual del
renunciante, y que no est prohibida su renuncia".
En razn del claro tenor de la clusula dcimo octava del contrato de mutuo de 31 de julio
de 1997 y de acuerdo a lo que, segn se ha expuesto en el motivo anterior, constituy el
propio accionar de las partes contratantes en el transcurso del normal cumplimiento de
sus reciprocas obligaciones, es posible inferir que tal como concluyeron los
sentenciadores del tribunal ad quem, la institucin demandante renunci tcitamente a su
759
OCTAVO: Que en el escenario en que se desarrollaron los hechos que dan lugar a la
controversia sub lite, conviene tambin considerar que establecida la clusula de
aceleracin en los trminos en que se la ha reproducido en el motivo segundo letra a) de
este fallo, e independientemente de la opinin de los sentenciadores de esta Corte que si
efectan una exgesis previa de las formas verbales en que fue convenida dicha
estipulacin para determinar la poca de exigibilidad de la obligacin, es indudable que
desde la fecha del incumplimiento o retardo en el pago de los dividendos Ns 102 y 103, el
plazo ya no era impedimento para que el acreedor pudiese accionar, requiriendo la
ntegra exigibilidad de la obligacin, por lo que, adems, en dicha circunstancia,
comenzara a correr el plazo de prescripcin extintiva de la accin, ya sea desde la poca
misma de la mora -en opinin de los sentenciadores que no hacen distincin respecto de
las formas verbales en que se haya escriturado la clusula de aceleracin- o desde la
interposicin de la demanda -distincin que aparecer determinante a quienes si
distinguen entre si la estipulacin es de naturaleza facultativa o imperativa-, conclusin
que, no obstante, en este caso resulta irrelevante, teniendo en consideracin que a la
fecha de interposicin de la demanda y mediante la entrega por parte del Banco de
Crdito e Inversiones de los correspondientes recibos de pago de los dividendos de los
meses de junio y julio de 2005, haba operado la renuncia del acreedor de su facultad de
acelerar la deuda a consecuencia de la mora o retardo del deudor en el pago de esos
dividendos, situacin que, en todo caso, cabe sealar, no podr esgrimirse con
posterioridad por el demandado para alegar en beneficio suyo la caducidad del plazo y la
consecuente prescripcin extintiva de la accin de cobro, pues la excepcionalsima
circunstancia fctica y jurdica, originada en la renuncia de un de recho por parte del
acreedor, debe entenderse, a la luz del principio de la buena fe contractual, oper en
beneficio de ambos contratantes, quienes de este modo manifestaron su intencin de
perseverar en el cumplimiento del contrato de mutuo en sus trminos originales, debiendo
entenderse igualmente que mediante el pago de los dividendos atrasados, el deudor
renunci tambin a su derecho a reclamar la caducidad del plazo con ocasin
precisamente de esa mora, tornndose preponderante en este caso a su respecto el
principio venire cum factum propium non valet, el cual determinara a su respecto que no le
ser lcito hacer valer posteriormente un derecho o una pretensin en contradiccin con la
anterior conducta, en la medida que este cambio de comportamiento importe un perjuicio
en contra del otro o sea contrario a la ley, las buenas costumbres o la buena fe;
REGLA .
760
a.- El sentido del establecimiento de una clusula de aceleracin -cualesquiera sean los
trminos que se empleen para ello-, es hacer exigible el total de una obligacin que se
paga en cuotas por el solo hecho de la mora o retardo en el pago ntegro y oportuno de
todo o parte de una de ellas, como si el crdito en su conjunto fuere exigible, aunque no
se haya producido la mora de las restantes parcialidades y ste es el derecho que le
asiste al acreedor, el de poder cobrar el total o saldo insoluto de la obligacin, en el slo
evento de la mora o retardo, an parcial, de alguna de las cuotas en que se dividi el
crdito
b.- En razn del claro tenor de una clusula segn la cual ""se considerar vencido el
plazo de la deuda y podr "el Banco" exigir el inmediato pago de la suma a que se
encuentre reducida, ms sus reajustes, intereses, comisiones y costas, en los casos
siguientes: a) Si se retarda el pago de cualquier dividendo ms de diez das;" y de
acuerdo a lo que constituy el propio accionar de las partes contratantes en el transcurso
del normal cumplimiento de sus recprocas obligaciones, es posible inferir que tal como
concluyeron los sentenciadores del tribunal ad quem, la institucin demandante renunci
tcitamente a su derecho a acelerar la deuda con ocasin de la mora o retardo en el pago
de algunos dividendos;
Es indudable que desde la fecha del incumplimiento o retardo en el pago de dichos
dividendos el plazo ya no era impedimento para que el acreedor pudiese accionar,
requiriendo la ntegra exigibilidad de la obligacin, por lo que, adems, en dicha
circunstancia, comenzara a correr el plazo de prescripcin extintiva de la accin, ya sea
desde la poca misma de la mora -en opinin de los sentenciadores que no hacen
distincin respecto de las formas verbales en que se haya escriturado la clusula de
aceleracin- o desde la interposicin de la demanda -distincin que aparecer
determinante a quienes si distinguen entre si la estipulacin es de naturaleza facultativa o
imperativa-, conclusin que, no obstante, en este caso resulta irrelevante, teniendo en
consideracin que a la fecha de interposicin de la demanda y mediante la entrega por
parte del acreedor de los correspondientes recibos de pago de los dividendos, haba
operado la renuncia del acreedor de su facultad de acelerar la deuda a consecuencia de
la mora o retardo del deudor en el pago de esos dividendos, situacin que, en todo caso,
cabe sealar, no podr esgrimirse con posterioridad por el demandado para alegar en
beneficio suyo la caducidad del plazo y la consecuente prescripcin extintiva de la accin
de cobro, pues la excepcionalsima circunstancia fctica y jurdica, originada en la
renuncia de un derecho por parte del acreedor, debe entenderse, a la luz del principio de
la buena fe contractual, oper en beneficio de ambos contratantes, quienes de este modo
manifestaron su intencin de perseverar en el cumplimiento del contrato de mutuo en sus
trminos originales, debiendo entenderse igualmente que mediante el pago de los
dividendos atrasados, el deudor renunci tambin a su derecho a reclamar la caducidad
del plazo con ocasin precisamente de esa mora, tornndose preponderante en este caso
a su respecto el principio venire cum factum propium non valet, el cual determinara a su
respecto que no le ser lcito hacer valer posteriormente un derecho o una pretensin en
761
4. CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 29 diciembre 2009. M.J. N 22946
Corte Suprema
Fallo:
VISTO:
En estos autos rol N 9.044-2005, seguidos ante el 27 Juzgado Civil de Santiago, juicio
en procedimiento hipotecario especial de la Ley General de Bancos, caratulados "Banco
de Crdito e Inversiones c/ Del Ro Araneda, Jos Luis", don Miguel Luis Vial Larran,
abogado, en representacin del Banco de Crdito e Inversiones, dedujo demanda de
desposeimiento en contra de don Jos Luis del Ro Araneda.
Expone que para garantizar el cumplimiento de las obligaciones que para el deudor
762
emanaron de dicho contrato de mutuo, don Jos Luis del Ro Araneda constituy primera
hipoteca en favor del Banco sobre el departamento N 207 y el uso y goce del
estacionamiento N 64, del Edificio Martn Pescador, ubicado en calle Vaticano N 300, de
la comuna de El Tabo, la cual se encuentra inscrita a fojas 4.171, N 1.393, del Registro
de Hipotecas y Gravmenes, del Conservador de Bienes Races de San Antonio del ao
1997.
Sostiene que en la especie se encuentran vencidos e impagos los dividendo del prstamo
desde el mes de junio de 2005, por lo que ha operado la causal de exigibilidad inmediata
del saldo total de lo comprometido, adeudndose, en consecuencia, la suma de 1.083,784
U.F., ms reajustes e intereses pactados y las costas de la causa. Solicita por tanto, que
se requiera al demandado por dicha cantidad con el objeto de que la pague dentro de
dcimo da, bajo el apercibimiento previsto en los artculos 103 y 104 de la Ley General
de Bancos, de subastar el inmueble hipotecado.
La sentencia de primera instancia de veintisis de mayo de dos mil seis, corriente a fojas
74, rechaz, con costas, la excepcin de pago y orden, en consecuencia, seguir
763
CONSIDERANDO:
PRIMERO: Que el recurrente sostiene que la sentencia de segundo grado, que revoc el
fallo de primera instancia, acogiendo, en definitiva, la excepcin de pago y rechazando la
demanda de autos, ha sido dictada con infraccin a los artculos 103 inciso segundo N 1
de la Ley General de Bancos y 19, 20, 22 y 23 del Cdigo Civil, segn pasa a explicar.
SEGUNDO: Que para la adecuada inteligencia del recurso en estudio, deben tenerse
presente las siguientes circunstancias que dicen relacin con el proceso:
otorg un mutuo a don Jos Luis del Ro Araneda por la suma de 1.480 Unidades de
Fomento, obligacin que el mutuario se comprometi a satisfacer mediante el pago de
doscientos treinta y dos dividendos mensuales, anticipados y sucesivos, a contar del 1 de
septiembre de 1997 y que se garantiz, adems, mediante la constitucin de primera
hipoteca sobre el departamento N 207 y el uso y goce del estacionamiento N 64, del
Edificio Martn Pescador, ubicado en calle Vaticano N 300, de la comuna de El Tabo. En
la clusula dcimo octava del referido contrato se acord que ""se considerar vencido el
plazo de la deuda y podr "el Banco" exigir el inmediato pago de la suma a que se
encuentre reducida, ms sus reajustes, intereses, comisiones y costas, en los casos
siguientes: a) Si se retarda el pago de cualquier dividendo ms de diez das;""
b).- Los dividendos Ns 102 y 103, con vencimiento los das 10 de junio y 10 de julio de
2005, fueron pagados por el deudor con fechas 21 y 25 de julio de 2005,
respectivamente.
e).- El deudor pag, en sus fechas de vencimiento original, los dividendos Ns 104 a 109,
correspondientes a los meses de agosto, septiembre, octubre, noviembre y diciembre de
2005, adems de enero de 2006;
QUINTO: Que en relacin al asunto sub lite, aparece importante precisar que el sentido
del establecimiento de una clusula de aceleracin -cualesquiera sean los trminos que
se empleen para ello-, es hacer exigible el total de una obligacin que se paga en cuotas
por el solo hecho de la mora o retardo en el pago ntegro y oportuno de todo o parte de
una de ellas, como si el crdito en su conjunto fuere exigible, aunque no se haya
producido la mora de las restantes parcialidades y ste es el derecho que le asiste al
acreedor, el de poder cobrar el total o saldo insoluto de la obligacin, en el slo evento de
la mora o retardo, an parcial, de alguna de las cuotas en que se dividi el crdito;
SEXTO: Que, del mismo modo, resulta tambin pertinente sealar que el pago es un acto
jurdico bilateral que supone la voluntad de ambas partes, tanto del que paga como del
que recibe y, de esta manera, la sola oferta o consignacin sin declaracin de suficiencia,
por parte del deudor, no puede en caso alguno importar una renuncia al plazo concedido,
ni a la facultad del acreedor de acelerar la deuda, en caso de haberse verificado la
hiptesis que la haca procedente, ya que se requiere, como se ha dicho, acuerdo del
766
De este modo, el pago como acto jurdico para que extinga total o parcialmente la
obligacin requiere manifestacin de voluntad de recibir y por tanto de liberar al deudor,
hecho que en el caso de autos, a la fecha en que se present la demanda, se haba
verificado respecto de los dividendos Ns 102 y 103, tal como fue asentado por los jueces
del mrito en uso de las facultades que les son exclusivas, cuando sealaron que tales
cuotas, con vencimiento los das 10 de junio y 10 de julio de 2005, fueron pagadas por el
deudor con fechas 21 y 25 de julio de 2005, respectivamente, esto es, con antelacin a la
presentacin de la demanda, hecho acontecido el 3 de agosto de 2008, debiendo,
asimismo, considerarse que el dividendo N 104 correspondiente al mes de agosto y los
posteriores, fueron pagados en sus fechas de vencimiento original, otorgando el Banco
ejecutante en cada caso los correspondientes recibos que daban cuenta de la aceptacin
y consentimiento en la satisfaccin de tales parcialidades;
SEPTIMO: Que conforme previene el artculo 12 del Cdigo Civil: "Podrn renunciarse los
derechos conferidos por las leyes, con tal que slo miren al inters individual del
renunciante, y que no est prohibida su renuncia".
En razn del claro tenor de la clusula decimo octava del contrato de mutuo de 31 de julio
de 1997 y de acuerdo a lo que, segn se ha expuesto en el motivo anterior, constituy el
propio accionar de las partes contratantes en el transcurso del normal cumplimiento de
sus reciprocas obligaciones, es posible inferir que tal como concluyeron los
sentenciadores del tribunal ad quem, la institucin demandante renunci tcitamente a su
derecho a acelerar la deuda con ocasin de la mora o retardo en el pago de los
dividendos Ns 102 y 103, cuestin que en atencin a lo consagrado en el artculo 12 del
Cdigo Civil le era permitido por la legislacin vigente, toda vez que el instituto acordado
ceda en su beneficio y su renuncia no se encuentra prohibida por las leyes;
OCTAVO: Que en el escenario en que se desarrollaron los hechos que dan lugar a la
controversia sub lite, conviene tambin considerar que establecida la clusula de
aceleracin en los trminos en que se la ha reproducido en el motivo segundo letra a) de
este fallo, e independientemente de la opinin de los sentenciadores de esta Corte que si
efectan una exgesis previa de las formas verbales en que fue convenida dicha
estipulacin para determinar la poca de exigibilidad de la obligacin, es indudable que
desde la fecha del incumplimiento o retardo en el pago de los dividendos Ns 102 y 103, el
plazo ya no era impedimento para que el acreedor pudiese accionar, requiriendo la
ntegra exigibilidad de la obligacin, por lo que, adems, en dicha circunstancia,
comenzara a correr el plazo de prescripcin extintiva de la accin, ya sea desde la poca
767
misma de la mora -en opinin de los sentenciadores que no hacen distincin respecto de
las formas verbales en que se haya escriturado la clusula de aceleracin- o desde la
interposicin de la demanda -distincin que aparecer determinante a quienes si
distinguen entre si la estipulacin es de naturaleza facultativa o imperativa-, conclusin
que, no obstante, en este caso resulta irrelevante, teniendo en consideracin que a la
fecha de interposicin de la demanda y mediante la entrega por parte del Banco de
Crdito e Inversiones de los correspondientes recibos de pago de los dividendos de los
meses de junio y julio de 2005, haba operado la renuncia del acreedor de su facultad de
acelerar la deuda a consecuencia de la mora o retardo del deudor en el pago de esos
dividendos, situacin que, en todo caso, cabe sealar, no podr esgrimirse con
posterioridad por el demandado para alegar en beneficio suyo la caducidad del plazo y la
consecuente prescripcin extintiva de la accin de cobro, pues la excepcionalsima
circunstancia fctica y jurdica, originada en la renuncia de un de recho por parte del
acreedor, debe entenderse, a la luz del principio de la buena fe contractual, oper en
beneficio de ambos contratantes, quienes de este modo manifestaron su intencin de
perseverar en el cumplimiento del contrato de mutuo en sus trminos originales, debiendo
entenderse igualmente que mediante el pago de los dividendos atrasados, el deudor
renunci tambin a su derecho a reclamar la caducidad del plazo con ocasin
precisamente de esa mora, tornndose preponderante en este caso a su respecto el
principio venire cum factum propium non valet, el cual determinara a su respecto que no le
ser lcito hacer valer posteriormente un derecho o una pretensin en contradiccin con la
anterior conducta, en la medida que este cambio de comportamiento importe un perjuicio
en contra del otro o sea contrario a la ley, las buenas costumbres o la buena fe;
Por estas consideraciones y visto, adems, lo dispuesto en las normas legales citadas y
en los artculos 765 y 767 del Cdigo de Procedimiento Civil, se rechaza, con costas, el
recurso de casacin en el fondo interpuesto en la peticin contenida en el primer otros de
la presentacin de fojas 101, por el abogado don Francisco Seplveda Figueroa, en
representacin del demandante, Banco de Crdito e Inversiones, en contra de la
sentencia de veinticuatro de octubre de dos mil ocho, escrita a fojas 98.
N 8.019-08.-.
Pronunciado por la Primera Sala de la Excma. Corte Suprema integrada por los Ministros
Sr. Sergio Muoz Gajardo, Sra. Margarita Herreros Martnez, Sr. Juan Araya Elizalde, Sr.
Guillermo Silva Gundelach y el Abogado Integrante Sr. Domingo Hernndez Emparanza.
Santiago, 29 de diciembre de 2.009.
769
Tema Clave
Tribunal
Considerando
5, 6 y 7.
CONSIDERANDOS RELEVANTES.
QUINTO: () Para destacar los rasgos de cada una conviene confrontar la obligacin
facultativa con la alternativa. La semejanza radica en que ambas pertenecen al gnero de
770
SEXTO: Ahora bien, en el caso sub lite cabe establecer que la Sociedad Forestal Trillium
Limitada, ahora Forestal Savia Limitada, representada por don Ronald Jay Packard, hizo
una donacin irrevocable al Fisco de Chile (clusula quinta de la escritura pblica de
donacin). De este contrato de donacin naci una obligacin determinada, consistente
en el pago de una suma de dinero equivalente a ochocientos cincuenta y seis mil dlares,
moneda de los Estados Unidos de Norteamrica, pero el objeto de la obligacin "la
prestacin- se poda cumplir de tres formas alternativas: bien en dinero depositado en
arcas fiscales, bien mediante ejecucin de obras, infraestructura, elementos o
instalaciones, o bien mediante una combinacin de ambos, segn se expresa en la
clusula octava. No es que se trate de una obligacin alternativa, sino que su
cumplimiento puede hacerse alternativamente.
REGLA .
a.- Si una sociedad hizo una donacin irrevocable al Fisco de Chile, de este contrato de
donacin naci una obligacin determinada, consistente en el pago de una suma de
dinero equivalente a ochocientos cincuenta y seis mil dlares, moneda de los Estados
Unidos de Norteamrica, pero el objeto de la obligacin -la prestacin- se poda cumplir
de tres formas alternativas: bien en dinero depositado en arcas fiscales, bien mediante
ejecucin de obras, infraestructura, elementos o instalaciones, o bien mediante una
combinacin de ambos, no es que se trate de una obligacin alternativa, sino que su
cumplimiento puede hacerse alternativamente.
Se estableci una obligacin facultativa, en los trminos del artculo 1505 del Cdigo Civil.
Se rechaza el recurso.
4. CITA DE FUENTE.
C. Suprema, 30 diciembre 2009. M.J. N 23023
Corte Suprema
772
Fallo:
Vistos:
En estos autos Rol 2537-1999, seguidos ante el Primer Juzgado Civil de Santiago, juicio
ordinario caratulado "Fisco de Chile con Forestal Savia Limitada", comparece doa Sylvia
Morales Gana, en representacin del Fisco de Chile, quien deduce demanda en Juicio de
Hacienda en contra de la Sociedad Forestal Savia Limitada, antes Forestal Trillium
Limitada, para que se declare que se condena a la demandada a tradir, entregar o pagar
al Fisco de Chile la suma de dinero de ochocientos cincuenta y seis mil dlares, moneda
de los Estados Unidos de Norteamrica, o su equivalente en moneda nacional a la fecha
de pago, o, en subsidio, la suma que el Tribunal seale, ms los intereses que ste
determine conforme a la ley y al mrito de autos, devengados desde el 31 de enero de
1999 o, en subsidio, desde la fecha que el tribunal seale conforme a la ley, sobre el
capital reajustado o, en subsidio, sobre el capital inicial, hasta la fecha del pago, tradicin
o entrega de la suma de dinero donada; y adems se le condene a pagar las costas del
juicio.
Seala que por escritura pblica de 2 de agosto de 1995, la Sociedad Forestal Trillium
Limitada, ahora Forestal Savia Limitada, representada por don Ronald Jay Packard, don
perpetua, irrevocable e incondicionalmente al Fisco de Chile, la suma de dinero
equivalente a ochocientos cincuenta y seis mil dlares, moneda de los Estados Unidos de
Norteamrica.
En otras palabras, expresa el actor, la Sociedad Forestal Trillium Limitada, ahora Forestal
773
Aade que por Resolucin N 68, de 3 de agosto de 1995, del Subsecretario de Bienes
Nacionales, se acept la donacin realizada por Forestal Trillium Limitada a favor del
Fisco de Chile en los trminos y modalidades contenidas en la escritura pblica antes
referida. Resolucin que fue cursada por la Contralora General de la Repblica, segn
documento de Toma de Razn N 024702 de 11 de agosto de 1995.
Refiere que la Sociedad Forestal Trillium Limitada, por escrittura pblica de 15 de marzo
de 1999, cambi su razn social por la de Forestal Savia Limitada, inscribindose como
tal en extracto rolante a fojas 6530, N 5261, del Registro de Comercio de 1999 del
Conservador de Bienes Races y de Comercio de Santiago.
Agrega que segn un primer borrador preparado por el mismo Ministerio de Bienes
Nacionales, de 12 de junio de 1995, se estableci que la donacin se hara "en un plazo
de tres aos contados desde la aprobacin del estudio de impacto ambiental del proyecto
Ro Cndor, presentado ante la Comisin Regional del Medio Ambiente de la XII Regin".
Dicho documento prueba que la intencin de las partes era cumplir con la donacin una
vez que el proyecto estuviera en marcha, y con los ingresos del proyecto pagarla. Agrega
que esta condicin no pudo ser formalizada en el convenio de donacin debido a la
imposibilidad de hacer donaciones condicionales al fisco.
Aade que a raz de sendos recursos de proteccin, Forestal Trillium Ltda. no pudo iniciar
su proyecto.
775
Mediante sentencia de nueve de mayo de dos mil dos, escrita a fojas 154 y aclarada a
fojas 211, la jueza titular del referido Tribunal acogi la demanda y conden a Forestal
Savia Limitada al pago de US$ 856.000 en su equivalente en pesos chilenos a la fecha
del pago efectivo, en favor del Fisco de Chile, con los intereses corrientes y reajustes de
conformidad a la ley, hasta la fecha del pago, y con costas; y declar que el dinero que se
777
Una de las Salas de la Corte de Apelaciones de Santiago, por resolucin de treinta y uno
de enero de dos mil ocho, desestim el recurso de casacin y confirm la sentencia en
alzada, con declaracin de que la suma ordenada pagar, devengar intereses corrientes
desde el 31 de enero de 1999.
CONSIDERANDO:
Agrega que el mismo sentenciador reconoce, en el considerando noveno, que este punto
778
debe ser dilucidado. No obstante, del anlisis de los motivos que preceden a la decisin
que acoge la demanda, se desprende que no se encuentran establecidos los
fundamentos de derecho en que la misma se apoya en este sentido, lo que produce una
flagrante contradiccin en dichos razonamientos.
SEGUNDO: Que el cargo que sustenta el primer vicio de casacin, consistente en que la
sentencia recurrida fue dictada con omisin de los requisitos que seala el artculo 170
N4 del Cdigo de Procedimiento Civil, especficamente la falta de fundamentos de
derecho para arribar a la decisin de condenar a la demandada a pagar al Fisco de Chile
una cantidad de dinero, sin antes calificar la naturaleza jurdica de la obligacin a que se
refiere el contrato de donacin sub lite, en trminos de establecer si la misma es
779
alternativa, segn opina su parte, o facultativa, como lo sostiene el Fisco, deber ser
desestimado, ya que el fallo que se revisa contiene todas las consideraciones de hecho y
de derecho necesarias para llegar a la determinacin adoptada, arribando en virtud de
ellas a la decisin de los asuntos que fueron sometidos a conocimiento del tribunal, en
forma cabal y suficiente.
TERCERO: Que el segundo yerro que denuncia el recurrente consiste en que la sentencia
contendra decisiones contradictorias, las que surgiran de la incompatibilidad de las
decisiones adoptadas por el fallo de primera instancia, ratificadas por el de alzada. Esta
alegacin tambin habr de desestimarse, toda vez que del anlisis de los antecedentes
no aparece de manifiesto que la sentencia contenga decisiones contradictorias.
CUARTO: Que a juicio del recurrente, la sentencia recurrida ha violentado las normas
sobre las obligaciones facultativas y alternativas, particularmente lo establecido en los
artculos 1499, 1500, 1501, 1505 y 1507 del Cdigo Civil, por falta de aplicacin, al haber
desatendido el tenor expreso de dichos preceptos y calificando como facultativa la
obligacin contrada por la demandada Forestal Savia Limitada, acogiendo as la
demanda impetrada, en circunstancias que de haber aplicado dichas normas habra
debido concluir que la obligacin contrada es alternativa.
Indica que, atendido lo sostenido por las partes en la etapa de discusin, la litis fue
trabada en un hecho fundamental: la naturaleza jurdica de la obligacin demandada, en
el sentido de que si lo debido por Forestal Savia es una sola cosa (el pago de una suma
de dinero) o varias cosas (donar obras pblicas en la XII Regin, donar U$ 856.000 o una
combinacin de ambas).
Seala que, pese a existir normas claras y precisas sobre la materia en discusin, el
780
De acuerdo a las normas infringidas, los sentenciadores no podan sino haber concluido
que el Fisco se encontraba absolutamente inhabilitado para demandar determinadamente
cualesquiera de las cosas pactadas, y, en consecuencia, la demanda tambin debi ser
rechazada por esta razn, pues lo contrario importa vulnerar el artculo 1501 del Cdigo
Civil.
QUINTO: Que para pronunciarse acerca de las pretensiones del recurrente, procede
analizar primeramente si se han producido las vulneraciones denunciadas, a los artculos
1499, 1500, 1501, 1505 y 1507 del Cdigo Civil.
Al respecto, cabe sealar que el artculo 1386 del referido cuerpo normativo establece que
"la donacin entre vivos es un acto por el cual una persona transfiere gratuita e
irrevocablemente una parte de sus bienes a otra persona, que la acepta".
Esta donacin entre vivos "tambin llamada irrevocable- es un contrato, esto es, un acto
jurdico bilateral que crea o establece derechos y obligaciones, el cual se perfecciona por
el concurso real de voluntades del donante y del donatario. El objeto del contrato son los
derechos y obligaciones que de l surgen, y el objeto de la obligacin es aquello que se
ha de dar, hacer o no hacer.
Atendiendo al nmero de objetos que constituyen la prestacin, las obligaci ones pueden
clasificarse en obligaciones de objeto nico, simple o singular y obligaciones de objeto
mltiple, plural o compuestas. Las primeras -obligaciones de objeto nico, simple o
singular- son aquellas en las cuales lo debido es una sola cosa, hecho o abstencin. Lo
comn es que la obligacin tenga un solo objeto. Pero, puede ocurrir que lo debido sean
dos o ms cosas, hechos o abstenciones, en cuyo caso estamos frente a obligaciones de
objeto mltiple, plural o compuestas.
Este tipo de obligacin puede cumplirse de dos maneras: pagando todas las prestaciones
que se deben, en cuyo caso nos encontramos frente a obligaciones acumulativas
"tambin llamadas obligaciones de simple objeto mltiple-, o slo alguna, en cuya
781
Las obligaciones alternativas "tambin conocidas como disyuntivas- son aquellas por las
cuales se deben varias cosas, de tal manera que la ejecucin de una de ellas exonera de
la ejecucin de las otras. Es decir, hay una eleccin del objeto de la obligacin, o una
cosa o la otra. Hay varias prestaciones debidas, pero al deudor le basta el cumplimiento
de una de ellas para extinguir la obligacin. Lo que caracteriza estas obligaciones es el
uso de la conjuncin disyuntiva "o"; si se usara la acumulativa "y" todas las cosas se
deberan. (Ren Abeliuk Manasevich, "Las obligaciones", Tomo I, Editorial Jurdica de
Chile, 1993, pg. 316).
A su vez, la obligacin facultativa "es la que tiene por objeto una cosa determinada, pero
concedindose al deudor la facultad de pagar con esta cosa o con otra que se designa"
(artculo 1505 Cdigo Civil). Lo que distingue a la obligacin facultativa es que hay un solo
objeto debido, pero el deudor, al momento del cumplimiento, puede liberarse de la
obligacin pagando con el objeto debido o con otro que l determine. En tal sentido, la
obligacin facultativa es de objeto mltiple, pero slo para el deudor.
Para destacar los rasgos de cada una conviene confrontar la obligacin facultativa con la
alternativa. La semejanza radica en que ambas pertenecen al gnero de obligaciones con
pluralidad de objetos. Pero se diferencian en que:
782
cosa debida.
SEXTO: Ahora bien, en el caso sub lite cabe establecer que la Sociedad Forestal Trillium
Limitada, ahora Forestal Savia Limitada, representada por don Ronald Jay Packard, hizo
una donacin irrevocable al Fisco de Chile (clusula quinta de la escritura pblica de
donacin). De este contrato de donacin naci una obligacin determinada, consistente
en el pago de una suma de dinero equivalente a ochocientos cincuenta y seis mil dlares,
moneda de los Estados Unidos de Norteamrica, pero el objeto de la obligacin "la
prestacin- se poda cumplir de tres formas alternativas: bien en dinero depositado en
arcas fiscales, bien mediante ejecucin de obras, infraestructura, elementos o
instalaciones, o bien mediante una combinacin de ambos, segn se expresa en la
clusula octava. No es que se trate de una obligacin alternativa, sino que su
cumplimiento puede hacerse alternativamente.
Por estas consideraciones y lo preceptuado en los artculos 764, 765, 766, 767 y 768 del
Cdigo de Procedimiento Civil, se rechazan los recursos de casacin en la forma
deducido a fojas 297 y en el fondo, a fojas 302, por el abogado don Jos Manuel
Valencia, en representacin de la parte demandada, en contra de la sentencia de uno de
enero de dos mil ocho, escrita a fojas 290.
Rol 2489-08
Pronunciado por la Primera Sala de la Excma. Corte Suprema integrada por los Ministros
Sr. Sergio Muoz Gajardo, Sra. Margarita Herreros Martnez, Sr. Guillermo Silva
Gundelach y los Abogados Integrantes Sra. Maricruz Gmez de la Torre Vargas y Sr.
Domingo Hern 'e1ndez Emparanza. Santiago, 30 de diciembre de 2.009.
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