La Salud Tridimensional

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La salud tridimensional

Los beneficios de abordar nuestra salud emocional considerando al espritu


como motor
por Gabriela Farinola
Psicloga clnica y Terapeuta transpersonal

En el principio de la vida, est contemplado el proceso de la cura


Indiscutiblemente, somos una unidad indivisible de espritu, mente y cuerpo.
Como en una orquesta, cuando todos los msicos ejecutan sus instrumentos
sintonizados con el director, el precioso resultado es una bella y perfecta meloda que
nos deleita con su armona. Lo mismo sucede si dejamos que nuestro espritu sea el
"director" de orquesta de nuestra vida, permitiendo que ste sea el motor que nos gue
y comande, con la sabidura de la Verdad y la Luz que contiene.
Sepamos que all es cuando se manifestar de manera profunda la armona, dibujada
con los bellos trazos del Amor. Desde ese apacible lugar, nuestra salud emerger
radiante y por sobre todas las cosas, permanecer instalada de forma duradera.
Reconectar con las leyes del espritu
Hay una Ley del Universo, que viene de Lo Alto, que nos dice: El espritu es principal
- La mente obedece - El cuerpo depende.
Si deseamos recuperar nuestra salud, armona y prosperidad, necesitamos volver
a conectar con esa amorosa Sabidura, a partir de la cual fuimos creados,
transmutando los principios de nuestra cultura materialista que solo han logrado
enfermarnos.
Volver al origen, que nos seala las ventajas de comenzar un trabajo de limpieza:
1. Purificando nuestro espritu, cual si fuera la naciente de un ro,
2. Luego, nuestro aspecto psicolgico, clarificando nuestras emociones,
sentimientos, creencias etc. Una mente ms limpia, vibra en frecuencias ms
altas y es ms positiva.
3. Como corolario, desembocar en el templo sagrado de nuestro cuerpo, quien
ser el que exprese el resultado de ese trabajo. El cuerpo espeja nuestro
estado espiritual.
Los sntomas corporales son la materializacin de impurezas que vienen desde el ro
arriba, son metfora de aquello que est profundamente arraigado en el espritu y an
no se ha limpiado. Si el espritu como "director" de la orquesta es desodo y se
ejecutan otras "voces", esa friccin va a reflejarse en el siguiente nivel, pudiendo
aparecer manifestaciones patolgicas en la mente y el cuerpo, que estarn
mostrando el escenario del conflicto.
Lo que se refleja no es solamente lo concerniente a nuestra vida actual, sino que
adems intervienen otras energas que se han grabado en nuestros cuerpos sutiles, y
que sin dudas tambin participan y generan consecuencias. Pero eso ser seguramente
tema para otra oportunidad...

La seal de alarma
La enfermedad nos marca un camino de aprendizaje. Somos responsables de
ella, como tambin lo somos de nuestra curacin.
El principio de la cura, est contemplado en el mismo principio de la vida que se nos ha
concedido. Curarse es tan natural como la digestin o la respiracin. Quiere
decir que fuimos diseados con todas las herramientas en nuestro interior para vivir
con salud en los tres cuerpos.
Ninguna enfermedad viene de afuera. Si perdemos nuestra armona, tenemos que
saber que nuestra frecuencia vibratoria disminuye lo suficiente para que abramos la
puerta y demos la bienvenida a cualquier enfermedad.
Ella es entonces una seal de alarma que se enciende para que escuchemos que
hemos perdido la sintona con los principios Supremos, la frecuencia del Amor, y el
Ideal que se aloja en nuestro interior.
El proceso comn es que una enfermedad comience de una forma suave y si
es desoda, aumente su intensidad hasta que logremos escucharla.
Enfermedad que no se toma en cuenta, es una oportunidad de aprendizaje para uno
mismo, que no se aprovech. Aquello que no se aprende, se repite, una y otra vez...
Lo que resistes, persiste. Hasta que entendemos, aprendemos y cambiamos.
Cuando aprendemos, se produce un despertar, un giro en la vida, que nos marca un
punto de no retorno. Ya no volveremos a ser los mismos.
Actitudes txicas
Seguramente podremos acordar en un punto bsico: las enfermedades estn ligadas a
la adiccin hacia actitudes txicas como la necesidad de control, manipulacin,
bsqueda frentica de resultados, xito, deseo interminable de consumo, etc.
Paradigma material, cultura del como si, espejismo.
Hoy estamos transitando una etapa evolutiva que propone dejar de lado los modelos
de individualidad, egosmo, competencia y beneficio personal. Quien se siga moviendo
as, no podr sobrevivir.
He aqu la fuente de nuestros problemas. Nos lanzamos tras la bsqueda equivocada.
Cual es la cura? La espiritualidad. All volvemos a encontrar responsablemente,
nuestro exacto lugar como la mxima creacin del Universo.
Cuando contactamos con lo Sagrado, obtenemos nuestro mejor alimento: la vibracin
del Amor. El amor es la frecuencia de Luz ms alta, que todo lo posibilita. A l tenemos
que retornar.
A partir de all es que podemos comenzar a cambiar lo que pensamos, y como
consecuencia lo que sentimos y hacemos, influyendo as en nuestro entorno y
semejantes. Segn piensas, sientes. segn sientes, actas. segn actas,
cosechas.
An estamos a tiempo
No crees que necesitamos con urgencia cambiar la manera de pensar, actuar, y
especialmente legar a las futuras generaciones, nuevas estrategias y formas de
trabajo, sintonizadas con los principios de equilibrio, bella armona y Luz que se
encuentran en la Naturaleza y en todo el Universo?
Esto puede lograrse, a partir del cruzamiento de los aspectos psicolgicos y

espirituales, permitiendo de esta forma la recuperacin de la salud integral.

ONICOFAGIA
por Dra. Elba Garber

Hay ciertos sntomas que comienzan en la niez y perduran en la adolescencia y en la


edad adulta o que comienzan en la adultez, como por ejemplo el comerse las uas.
Esto se llama onicofagia, pero el comerse las uas no es una enfermedad, sino un
sntoma que aparece debido a determinadas situaciones que tienen que ver con
tensin y ansiedad.
En el caso de los nios, pueden tensionarse debido a determinadas situaciones
familiares que estan relacionadas a los cambios en el ambiente a nivel energtico o
emocional.
Momentos de dificultades econmicas, como por ejemplo: cambio o prdida de trabajo,
inversin de los roles dentro de la familia donde antes la mam estaba con los hijos y
el pap sala a trabajar; cualquiera de estas situaciones condicionan al nio para
cargarse de ciertas angustias, temores, incertidumbres o inseguridades.
Todas estas circunstancias familiares hacen que el nio se cargue de ansiedades y en
algn momento se empiece a comer las uas. Esto no es una enfermedad sino un
desequilibrio emocional que de alguna manera lo distrae, le hace descargar
supuestamente esa tensin y esa ansiedad pero se va lastimando, y en momentos en
los que se encuentra en situaciones de tensin hace que se transforme en un hbito,
casi un acto reflejo, hacindose una costumbre que a veces es vivida con vergenza
porque hace que los dems nios se burlen de l.
El comerse las uas desva esa tensin que no sabe como procesar.
Se puede dejar de hacer esto a travs de una medicacin especfica para poder
armonizar el desequilibrio emocional negativo que provoca esto, que empez como un
acto casual y se transform en un hbito que llevamos a la edad adulta donde
compromete nuestra imagen social y lo vivimos con vergenza y molestia.
Existen mtodos como ser con sustancias qumicas con gustos repulsivos alrededor de
los dedos o el vendaje de los mismos para evitar que lleguen a los dientes, que
fracasan a corto plazo.
El tratamiento psicolgico especfico consistira en buscar la causa de la ansiedad
acumulada.

PSICOLOGA MSTICA
por Prof. Carlos A. Papaleo

La Psicologa Mstica es una manera de ver, comprender y totalizar nuestra experiencia


de ser, desde una perspectiva o dimensin de la conciencia que aporta un modo de
conocimiento especfico, al que llamamos "mstico".
Implica vivenciar la unidad y la totalidad de la Vida y participar de una conciencia
universal, experimentando el yo como una porcin individualizada de esa Vida
Universal, es decir, como un segmento no separado del Todo (pars sine partitione). De
modo que el mstico vive instalado conscientemente en un universo holstico, y
comprende como hecho vivido lo que la Ontologa enuncia como hecho sabido: "EL SER

ES UNO".
Esta dimensin de la conciencia en tanto vivencia es objeto de la comprensin
psicolgica, excepto naturalmente para quienes padecen de deficiencia espiritual, al
modo del "filisteo" que describe Schopenhauer. Contrariamente a la creencia vulgar o
al prejuicio cientificista, esta experiencia no requiere ausentarse de lo cotidiano ni
flotar en un divague ms o menos sentimental. Precisamente, cuando este
conocimiento vivido constituye un estado de conciencia persistente o habitual, esto es,
un "Temple Mstico" se halla siempre presente como conciencia de fondo,
sustentando un nuevo Modo de Existencia, con su peculiar concepcin del mundo y de
s mismo.
Para morar en estos niveles superiores de conciencia es imprescindible desengancharse
del estrecho y empobrecedor paradigma cientfico material en el que buena parte del
conocimiento psicolgico qued atascado en el presente siglo.
En el nuevo paradigma que se est conformando es posible abrirse a otras
dimensiones y totalizar nuestra experiencia de ser y del Ser. Cada da ms, nos
atrevemos a pensar en grande y a ser nosotros mismos, fuera de los modelos
programatorios y libretos sacralizados de ciertos autores y corrientes de pensamiento,
que con sus exigencias de sometimiento y sus sistemas de creencias han encerrado el
vivenciar en prisiones mentales.
La Psicologa Mstica nos muestra el camino para ingresar a una experiencia "cumbre",
en la que es posible advertir que somos mucho ms que lo que creemos que somos. Y
esta experiencia constituye adems un componente esencial de la configuracin
dinmica bio-psico-socio-espiritual, que es la personalidad humana.
De aqu surge el concepto de "exigencialidad" de esta experiencia en el proceso de
autorrealizacin.
Y cul es el "a priori" de posibilidad de esta experiencia? C. Jung lo vincula "al ms
fundamental de los impulsos, el impulso hacia la Unidad y la Totalidad" emergiendo de
una tendencia de la psique humana: la funcin religiosa. sta es la que hace posible la
inteleccin o intuicin de conexin y totalidad, que como lo indica J. Nuttin, se expresa
en la "necesidad de integracin universal". Es oportuno sealar que esta funcin
espiritual del pensamiento que se expresa como Inteligencia Intuitiva no tiene lmites
en su desarrollo, salvo los que nosotros mismos nos imponemos desde nuestras
programaciones de disminucin.
Como resultado de la conformacin de este nuevo Modo de Existencia, se producen
cambios radicales en los patrones de pensamiento y un incremento de la comprensin,
sensitividad y poder mental. Es decir, que esta experiencia revela en sus profundidades
la naturaleza radical del yo y es un proceso de transformacin.

LAS FORMAS DE LA AGRESIN


por Lic. Anacelis Castro

Tenemos agresiones fsicas, emocionales, mentales e incluso tambin espirituales.


La agresin se puede expresar en diferentes reas y con infinidad de formas y
siempre son juegos de boicot, generalmente inconcientes. Fundamentalmente tienen
dos agrandes asentamientos, en las culpas; las cuales activan agresiones que pasan
a ser autocastigos; y la desvalorizacin, por ejemplo, yo me desvalorizo, entonces
en una situacin determinada no me supe defender, por lo tanto me culpo y me

castigo.
De aqu pueden surgir el alcohol, el cigarrillo o relaciones en donde generamos
dependencia, me enamoro de quien me puede lastimar. Es una forma de poner mi
agresin afuera.
Tambin puedo hacerlo con las "gratificaciones" en las que de alguna manera me estoy
asegurando pasarlo mal despus. Por ejemplo, planear un viaje que no puedo pagar o
no puedo hacer, por lo cual no voy a poder disfrutar lo que compr. Planear un viaje a
la nieve cuando s que el fro me trae muchos problemas. Comer chocolate porque me
encanta sabiendo que le tengo alergia y que mi cuerpo no lo tolera, etc.
Hay enfermedades que nacen directamente del patrn de la agresin, como los
clculos en la vescula, los tumores, quistes, etc. Est tambin el "trabajlico" o sea el
adicto al trabajo. Estos son los que dicen, "trabajo tanto... me voy a gratificar" y lo
hace con cosas como fumar de ms, comer de ms, tomar de ms, etc. Todas estas
"gratificaciones" nos van a llevar a tener problemas fsicos despus. En las relaciones
"obsesivas", ya sea de pareja o con amigos, est jugando la agresin; en donde nos
sentimos invadidos y no sabemos como defendernos, o en una relacin con una
persona que nunca quiera o pueda hacer nada y esto me obligue a m a trabajar por
dos, tomar decisiones por dos y me sienta agobiado por responsabilidades que no
puedan ser compartidas.
Sera bueno observar nuestro entorno y ver cuales son nuestros verdaderos momentos
de disfrute, en donde realmente nos sintamos bien, a todo nivel; sin que haya despus
ninguna consecuencia que no sea buena para nuestro ser y nuestra vida.

LA MUERTE
por Lic. Ins Beatriz Citro Albizu

Sabemos que en los diversos campos sociales de la actualidad, nuestra capacidad


individual de lograr afrontar el hecho de la muerte, se ve absolutamente disminuda;
negando con absurda obstinacin algo que es natural. Parte de la vida misma.
Esto implica una cierta ceguera e inmadurez interna para lograr asumir la realidad.
En definitiva, vida y muerte son dos caras inseparables de la misma moneda. Como el
Yin y el Yang o como el da y la noche...
Mantener la pretensin de seguir viviendo en la ignorancia del hecho concreto de la
muerte, como si nunca nos fuera a suceder a nosotros... nos lleva a integrarnos en una
"farsa social" en la cual es vlido todo aquello que tiene que ver con lo bello, joven,
saludable y exitoso en cualquiera de sus facetas posibles. O sea: mirar hacia un solo
lado de la vida... e ignorar la vejez, la enfermedad y la muerte.
El padecer una enfermedad terminal implica una marginacin sutil, no solo social, sino
familiar e ntima, ya que es negada con obstinacin la idea del final de la vida.
Considero, (unificando mi trabajo con el de muchos otros profesionales del tema, en
diversos pases del mundo) que es hora de afrontar nuestra verdad, y de trabajar en
ella, aceptando la visible y permanente autenticidad del inevitable paso de la vida
hacia la muerte.
La Formacin de Acompaantes Teraputicos para los pacientes terminales, lleva en s,
un profundo trabajo y una laboriosa tarea del alumno; pues no se puede dar lo que no
se tiene, y por ende, el compromiso a asumir implica una intensa investigacin
individual sobre nosotros mismos. Esta labor hace necesaria una tarea no solo de

informacin, investigacin y metodologa de trabajo, respecto a las diversas etapas que


atraviesa el paciente terminal, sino y por sobre todas las cosas, la propia decisin del
futuro acompaante teraputico para enfrentarse con sus propios miedos, los cuales,
como bien sabemos, tienen sin lugar a dudas, su raiz mas profunda en uno solo: el
miedo a morir.
Debemos preguntarnos, llegados a este punto, si en realidad somos capaces de mirar a
los ojos del moribundo y conectarnos autnticamente frente a l, desde nuestra
realidad; aceptando realmente dentro nuestro, la difcil etapa que est atravesando, y,
en consecuencia, viviendo junto a l, la experiencia cumbre de la vida.
Se necesita valor para conocer. Entereza para aceptar.
Humildad para aprender de ellos, que en definitiva terminan siendo nuestros
verdaderos maestros; pero por sobre todas las cosas, el acompaante terapeutico
debe estar pleno de muchisimo amor por todos y cada uno de los seres humanos.
Mucho mas all de la diversidad de sexos, razas, religiones, etc.
Y todos, definitivamente todos, pasaremos ese umbral. Sobre esto, no cabe duda.
Me atrevo a afirmar que es lo nico sobre lo cual estamos seguros. El resto..entra
siempre dentro del clculo de las probabilidades...
Dedicarme a esta tarea, es para m, un importante paso logrado a travs de toda una
vida de bsqueda de LA VERDAD. Mi verdad interior.
Buscando, estudiando, investigando, y siempre preguntandome: " hacia donde
vamos?... de donde venimos?..", entre otro sinfn de inquietudes que todo caminante
en el sendero de la autorrealizacin se hace.
Mi propia experiencia de "cuasi-muerte", abri en m, un campo magnfico de
comprensin ante la innegable realidad de la muerte misma.
Todos los esfuerzos que logremos realizar para mejorar y suavizar el choque inevitable
que atraviesa el enfermo en su prxima extincin, no solamente ser un maravilloso
privilegio, sino un ineludible deber que, solo nuestro corazn abierto y nuestro sentido
humanitario podrn aliviar.
En la vida, tenemos infinidad de puertas abiertas a todo tipo de experiencias,
expectativas, ilusiones, fracasos, proyectos,etc.
Pero, si sabemos ver, ms all de mirar... lograremos darnos cuenta que ninguno de
nosotros escapa a la muerte. Aunque disfracemos nuestra existencia evitando pensar
en ella.
Para finalizar, cito a la Dra Elizabeth Kbler Ross cuando expresa:
"...Morir es simplemente, trasladarse a una casa ms bella..."

LOGRAR LA PAZ
por Marta I. Villafae

Recuerdos del pasado, temores por el futuro, conmocin por el presente, parecera
imposible lograr un poco de paz interior, no es as? Quizs la cuestin pasara por estar
acostumbrados a buscar la felicidad, la tranquilidad, la seguridad, en el afuera. Ahora
ms que nunca se est viendo que la seguridad, por ejemplo, no la vamos a encontrar
ni en billetes, ni empresas, ni siquiera en pases ya que nada parece estable y la
confianza en los viejos sistemas se estara derrumbando.
Estamos en un tiempo de crecimiento acelerado, individual y planetario y esto nos
obliga a resolver lo que nos crea conflicto para pasar a un nuevo estado de conciencia,
estado en el que viviremos mucho ms plenos y felices.
Pero qu hacemos en este lapso de tiempo, en este mientras tanto donde lo que est

dejando de ser nos desorienta y lo que vendr como no lo conocemos nos da miedo?
Hay muchas cosas que podemos hacer, pero lo primero y principal sera alejarse de
todo lo que de alguna manera nos haga ms difcil el camino, como por ejemplo,
sentarse mucho tiempo frente al televisor o leer diarios o revistas y ver informaciones
tremendas, accidentes, catstrofes, muertes, empobrecimiento, carencias sin fin,
pronsticos alarmantes, en fin, toda una batera de noticias que solo nos angustian y
llenan de temores.
Hagamos nuestro propio lugar dentro del caos, creemos desde nosotros, armona,
serenidad, dedicacin a nuestro trabajo, familia, seres queridos. Tommonos el tiempo
para considerar nuestras necesidades, ver qu cosas tendramos que cambiar para
estar mejor o dejar de tener tal o cual problema. Centrmonos en lo BUENO, solo en lo
BUENO.
La paz, la seguridad, la alegra, la belleza estn dentro nuestro y debemos reaprender
a expresar todo eso en nuestro mundo. Busquemos lugares agradables a donde ir,
gente de buena onda con quien estar, con quien compartir sonrisas, lugares donde
podamos practicar el aquietarnos, el contacto con nuestra esencia. Todo eso nos
ayudar a reencontrarnos, a sentirnos serenos para volver a conectarnos con ese lugar
de inmensa paz que est en nuestro corazn.

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