Bachelard, Nuevo Espíritu Científico - e
Bachelard, Nuevo Espíritu Científico - e
Bachelard, Nuevo Espíritu Científico - e
La ciencia no avanza como los puntos sucesivos de un plano cartesiano, ordenado apriori y
con el cual es irrelevante lo diferente porque ya todo est previsto en unos planos finitos.
La ciencia la hacen los hombres. Con sus peculiaridades, sus hbitos, sus costumbres, sus
interpretaciones, sus sociedades de referencia. La labor cientfica sucede en la historia,
indica primeramente identificar al ser humano, a su horizonte personal, individual y social,
como fuentes inomitibles.
De otra parte, para Bachelard no es lo claro el motor del descubrimiento cientfico, sino lo
oscuro, aquello que est sin resolver y que impele a una mayor complejidad y completud
(totalidad por aproximaciones sucesivas). Pero estas iluminaciones no han sido del todo
expeditas, se descubren mecanismos que han entorpecido una mejor y mayor visin de la
realidad. Bachelard indaga en la historia de la ciencia y denuncia una serie de
impedimentos. Opera como antao lo hiciera Bacon y su teora de los dolos. Ahora, bajo el
concepto de obstculo epistemolgico, evidencia los malos hbitos de investigacin y
pensamiento que han impedido un conocimiento completo y consistente. Obstculos que
deben reflexionarse porque hacen parte del soporte social del conocimiento, porque
constituyen los criterios propios de la historia.
En La formacin del espritu cientfico (1994) nos seala un iluminador recorrido por los
obstculos epistemolgicos, el fundamento subjetivo-psicolgico y social del conocer, y
realiza una agudsima aplicacin del psicoanlisis en la historia cientfica. Psicoanaliza,
libidiniza, sexualiza para adentrarse en las profundidades no reveladas del quehacer
cientfico. Con las palabras del autor, miremos primero este punto negativo obstculos,
necesario para criticar y posteriormente proponer:
Cuando se investigan las condiciones psicolgicas del progreso de la ciencia, se
llega muy pronto a la conviccin de que hay que plantear el problema del
conocimiento cientfico en trminos de obstculos. No se trata de considerar los
obstculos extremos, como la complejidad o la fugacidad de los fenmenos, ni
de incriminar a la debilidad de los sentidos o del espritu humano: es en el acto
mismo de conocer, ntimamente, donde aparecen, por una especie de necesidad
funcional, los entorpecimientos y las confusiones. Es ah donde mostraremos
causas de estancamiento y hasta de retroceso, es ah donde discerniremos causas
de inercia que llamaremos obstculos epistemolgicos" (Bachelard, 1994, 15).
Los obstculos epistemolgicos han terminado gestando conocimientos mal adquiridos, ya
sea por la superficialidad con que se asimilaron, o por la imprecisin de los mismos. Para
identificar el obstculo es necesario tener siempre una pregunta en torno al objeto, y
adems dar con la respuesta. Bachelard explica que los obstculos epistemolgicos que