Escrito Con Sangre... ¡El Website de Los Asesinos! Adolfo de Jesús Constanzo y Sara Aldrete 'Los Narcosatánicos'
Escrito Con Sangre... ¡El Website de Los Asesinos! Adolfo de Jesús Constanzo y Sara Aldrete 'Los Narcosatánicos'
Escrito Con Sangre... ¡El Website de Los Asesinos! Adolfo de Jesús Constanzo y Sara Aldrete 'Los Narcosatánicos'
l y tuvo un hijo.
Constanzo empez a proporcionarle clientes a su madre y fue ganndose la
reputacin de mdium, de orculo y de brujo capaz de predecir el futuro
leyendo los astros. En 1983, a los veintin aos, l y su madre se
mudaron a la Ciudad de Mxico, donde le haban ofrecido un trabajo de
modelo. All hizo muchos amigos y realiz contactos, especialmente entre
el submundo homosexual de la ciudad. Entretanto, su fama como sacerdote
de Santera, curandero y profeta fue creciendo. La clase alta mexicana,
los artistas e intelectuales, y sobre todo los polticos y
narcotraficantes, empezaron a recurrir a sus poderes para asegurar el
buen fin de los negocios de drogas. Sus ingresos se multiplicaron e
incluso la polica lo consultaba.
Durante esta poca, su madre le envi a perfeccionarse con otro santero
llamado El Grande. Al volver de su perodo de estudio, Constanzo
introdujo en sus ritos los sacrificios humanos. Haba penetrado en el
lado oscuro del Palo Mayombe. El atractivo aspecto de Adolfo y su
magnetismo personal le hicieron irresistible para ambos sexos. Constanzo
recorri el camino del Palo Mayombe hasta el final, practicando los
sacrificios humanos, la antropofagia y la tortura.
Los seguidores de Constanzo, a quien conocan como El Padrino, se
entregaban a l en cuerpo y alma porque el cubano los embelesaba con
promesas de riqueza y enormes ganancias, todo ello aliado con una forma
de actuar violenta y vengativa. La ligazn con la que los ataba se
converta as en un autntico pacto de sangre. Saba lo perturbador que
poda resultar la mezcla formada por la concesin de favores sexuales y
el castigo violento. Sus devotos quedaban as totalmente desorientados.
Constanzo era un manipulador nato, un maestro en explotar las
debilidades fsicas de los seres humanos, aprovechndolas para llevar a
cabo sus planes.
Sara Mara Aldrete Villareal naci el 6 de septiembre de 1968 en
Matamoros, Tamaulipas (Mxico), donde creci. Se cas a los dieciocho
aos y se divorci a los veinte. En 1985 se matricul en el Texas
Southmost College para cursar un peritaje de dos aos en educacin
fsica. Era alta, atltica, de casi 1.80 de estatura, y llamaban la
atencin sus grandes ojos. El Southmost College se encuentra en
Brownsville, al otro lado del puente que separa Matamoros de Estados Unidos.
All, Sara se relacion con un narcotraficante llamado Gilberto Sosa,
con quien mantuvo una relacin amorosa. Cada fin de semana Sara Aldrete
volva a Mxico, a casa, donde a finales de 1986 conoci a Constanzo. Su
Grand Marquis se top con el vehculo de Sara Aldrete. Los amigos de
Constanzo se pusieron a increparla, pero l la invit cortsmente a
tomar un caf y de paso le ley las cartas del tarot. Le predijo que
alguien muy cercano le contara un problema y que ella no sabra cmo
ayudarle.
En su libro de memorias /Me dicen la Narcosatnica/, Sara Aldrete narra
su primer encuentro con Constanzo:
//(Constanzo y otros dos venan en un Grand Marquis)/, pasndose el
camelln (la banqueta era baja). Aceler, pero en seguida me alcanzaron.
Me hacan seales de que me parase. Yo negaba con la cabeza. La
adrenalina se empez a apoderar de m. La misma sensacin que senta de
pequea cuando me iba detrs de los sepelios, rumbo al panten. Me
acercaba al fretro antes que lo bajaran al hoyo, y vea la cara del
muertito para identificarlo entre los deudos. Cuando lograba encontrar
Solan ser tipos duros que conocan bien la ley de la calle. Pero la
negativa de Mark no fue lo suficientemente rpida. El alcohol y el
cansancio pudieron con l. Los mexicanos se dieron cuenta de que
titubeaba; lo cogieron en volandas, lo metieron en la camioneta y el
vehculo desapareci de la bulliciosa calle. Mark se dio cuenta de que
corra peligro. El conductor se detuvo en un callejn para orinar y Mark
aprovech el momento; se zaf de sus dos guardianes, salt de la
camioneta y ech a correr. Pero no se haba fijado en que otra camioneta
Chevrolet los segua. Dos tipos se bajaron y volvieron a atraparle. Le
metieron a empujones en la Chevrolet y lo amenazaron con una navaja. Se
hospedaron en el Hotel Del Prado, de donde Kilroy casi se escap por
segunda ocasin.
Sus amigos empezaron a preocuparse cuando vieron que no apareca en el
puente. Regresaron a Mxico y recorrieron las calles y bares de la
ciudad, hasta que se hizo de da. A estas alturas estaban muertos de
cansancio y se fueron a dormir unas horas a una habitacin de hotel de
South Padre antes de rellenar un impreso de personas desaparecidas en la
agencia del Ministerio Pblico. A la maana siguiente, en Matamoros,
notificaron la desaparicin en el consulado estadounidense. Despus
llamaron a los padres de Mark en Santa Fe, Helen y Jim Kilroy, y les
dijeron que su hijo se haba perdido en Mxico.
Las dos camionetas recorrieron kilmetros a travs del campo hasta
detenerse frente a un grupo de endebles barracas en una granja. Mark
Kilroy fue obligado a permanecer sentado en una vieja hamaca. Llegaron
ms hombres; algunos llevaban armas automticas. Sus esperanzas se
desvanecieron. No haba forma de escapar. Pasaron las horas lentamente,
y al alba, un anciano le dio un poco de agua y una sartn con unos
huevos revueltos. Los mexicanos le dijeron que no se preocupara, que no
le iba a pasar nada. Kilroy se pas un buen rato rezando. A las 12:00
horas, el joven segua sentado en la hamaca. Poco despus le condujeron
a una construccin de madera, y una vez dentro lo ataron de pies y
manos. Un olor a podrido enrareca el ambiente. Nubes de ruidosas moscas
se agolpaban sobre algo que haba en el fondo oscuro de la barraca.
Los guardias lo obligaron a arrodillarse y lo amordazaron con cinta
adhesiva pegada a los labios. Alguien dio una orden, as que volvieron a
arrastrarlo al exterior y lo colocaron sobre una lona alquitranada
extendida en el suelo. Detrs de l, alguien levant un machete y le
propin un golpe seco en la nuca. Mark Kilroy muri al instante. Un
miembro de la banda declar despus que el sonido del machete impactando
sobre la cabeza son como si /cascaras un coco/. Tras asesinarlo, le
extrajeron el cerebro y lo pusieron a hervir en la nganga, en la propia
sangre del chico. Le quitaron adems la columna vertebral, con la cual
fabricaron amuletos y collares para proteccin. Le amputaron las
piernas, le quitaron la carne y la devoraron. Con un fragmento de la
columna vertebral de Kilroy, Constanzo se fabric un alfiler de corbata
que en adelante utiliz. Los huesos del joven fueron colocados en
cubetas vacas.
La noche del 5 de abril, David Serna Valdez, un homosexual apodado El
Coqueta, se salt, al volante de un Chevrolet Silverado con placas de
Texas, un control de carretera montado por el Ejrcito Mexicano y la
Polica Judicial Federal. Durante la ltima semana la polica haba
estado vigilando las carreteras fronterizas con la esperanza de atrapar
a algn contrabandista de drogas. La Agencia Antidroga Estadounidense
(DEA) haba movido los hilos en las altas esferas: Mark Kilroy estaba
emparentado con un Senador de los Estados Unidos y sus padres haban