CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
ENTRE LAS SUSTENTADAS POR EL PRIMER
TRIBUNAL
COLEGIADO
EN
MATERIAS
ADMINISTRATIVA Y DE TRABAJO DEL
DCIMO PRIMER CIRCUITO Y EL SPTIMO
TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL
DEL PRIMER CIRCUITO
MINISTRO PONENTE: ARTURO ZALDVAR LELO DE LARREA
SECRETARIO: ARTURO BRCENA ZUBIETA
SECRETARIOS AUXILIARES: ARTURO GUERRERO ZAZUETA Y
SANTIAGO JOS VZQUEZ CAMACHO
Vo. Bo.
Mxico, Distrito Federal. Acuerdo del Tribunal Pleno de la
Suprema Corte de Justicia de la Nacin, correspondiente al da tres de
septiembre de dos mil trece.
Cotej:
V I S T O S para resolver los autos de la contradiccin de tesis
293/2011, entre las sustentadas por el Primer Tribunal Colegiado en
Materias Administrativa y de Trabajo del Dcimo Primer Circuito y el
Sptimo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito.
R E S U L T A N D O:
PRIMERO. Denuncia de la contradiccin. **********, por
conducto de su autorizado **********, mediante ocurso recibido el
veinticuatro de junio de dos mil once en la Oficina de Certificacin
Judicial y Correspondencia de la Suprema Corte de Justicia de la
Nacin, denunci la posible contradiccin de tesis entre los criterios
sostenidos por el Primer Tribunal Colegiado en Materias Administrativa
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
y de Trabajo del Dcimo Primer Circuito al resolver el amparo directo
1060/2008 y los criterios sostenidos por el Sptimo Tribunal Colegiado
en Materia Civil del Primer Circuito al resolver los amparos directos
344/2008 y 623/2008.
El citado precedente resuelto por el Primer Tribunal Colegiado en
Materias Administrativa y de Trabajo del Dcimo Primer Circuito dio
lugar
las
tesis
aisladas
de
rubros
TRATADOS
INTERNACIONALES. CUANDO LOS CONFLICTOS SE SUSCITEN
EN RELACIN CON DERECHOS HUMANOS, DEBEN UBICARSE
AL
NIVEL
DE
LA
CONSTITUCIN1
CONTROL
DE
CONVENCIONALIDAD EN SEDE INTERNA. LOS TRIBUNALES
MEXICANOS ESTN OBLIGADOS A EJERCERLO.2
Por su parte, el criterio sostenido por el Sptimo Tribunal
Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito en el amparo directo
344/2008 dio origen a la tesis aislada de rubro DERECHOS
HUMANOS, LOS TRATADOS INTERNACIONALES SUSCRITOS
POR MXICO SOBRE LOS. ES POSIBLE INVOCARLOS EN EL
JUICIO DE AMPARO AL ANALIZAR LAS VIOLACIONES A LAS
GARANTAS
INDIVIDUALES
QUE
IMPLIQUEN
LA
DE
AQULLOS;3 mientras que al resolver el amparo directo 623/2008,
dio origen a la tesis aislada JURISPRUDENCIA INTERNACIONAL.
Novena poca; Registro: 164509; Instancia: Primer Tribunal Colegiado en Materias
Administrativa y de Trabajo del Dcimo Primer Circuito; Tesis Aislada; Fuente: Semanario Judicial
de la Federacin y su Gaceta; Localizacin: Tomo XXXI, Mayo de 2010; Materia(s): Comn; Tesis:
XI.1o.A.T.45 K; Pg. 2079.
2
Novena poca; Registro: 164611; Instancia: Primer Tribunal colegiado en Materias
Administrativa y de Trabajo del Dcimo Primer Circuito; Tesis Aislada; Fuente: Semanario Judicial
de la Federacin y su Gaceta; Localizacin: Tomo XXXI, Mayo de 2010; Materia(s): Comn; Tesis:
XI.1o.A.T.47 K; Pg. 1932.
3
Novena poca; Registro: 169108; Instancia: Sptimo Tribunal Colegiado en Materia Civil
del Primer Circuito; Tesis Aislada; Fuente: Semanario Judicial de la Federacin y su Gaceta;
Localizacin: Tomo XXVIII, Agosto de 2008; Materia(s): Comn; Tesis: I.7o.C.46 K; Pg. 1083.
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
SU UTILIDAD ORIENTADORA EN MATERIA DE DERECHOS
HUMANOS.4
SEGUNDO. Trmite ante la Suprema Corte. El Presidente de
la Suprema Corte de Justicia de la Nacin, mediante auto de
veintinueve de junio de dos mil once, orden formar y registrar el
expediente relativo a la denuncia de contradiccin de tesis bajo el
nmero 293/2011. Asimismo, solicit al Presidente del Primer Tribunal
Colegiado en Materias Administrativa y de Trabajo del Dcimo Primer
Circuito para que, de no existir impedimento legal alguno, informara a
este Alto Tribunal si ********** tena reconocida personalidad en el
juicio de amparo directo 1060/2008 y, en caso de que as fuera,
remitiera los autos originales del mencionado juicio de amparo directo
o copia certificada de la resolucin dictada en el mismo, as como la
informacin en soporte electrnico que contuviera la sentencia emitida
en el referido juicio de amparo directo para que se estuviera en
posibilidad de integrar la posible contradiccin de tesis.
Por auto de cuatro de agosto de dos mil once, el Presidente de
este Alto Tribunal tuvo por recibidos los autos originales del citado
amparo directo, as como el soporte electrnico que contiene la
resolucin. Asimismo, orden girar oficio al Presidente del Sptimo
Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito para que
remitiera
los
expedientes
relativos
los
amparos
directos
concernientes a su ndice o copia certificada de las resoluciones
dictadas en los mismos, as como el soporte electrnico que
contuviera dichas sentencias.
Novena poca; Registro: 168312; Instancia: Sptimo Tribunal Colegiado en Materia Civil
del Primer Circuito; Tesis Aislada; Fuente: Semanario Judicial de la Federacin y su Gaceta;
Localizacin: Tomo XXVIII, Diciembre de 2008; Materia(s): Comn; Tesis: I.7o.C.51 K; Pg. 1052.
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Posteriormente, por acuerdo de quince de agosto de dos mil
once, el Presidente de esta Suprema Corte de Justicia de la Nacin
tuvo por recibidas las copias certificadas de las ejecutorias dictadas en
los amparos directos 344/2008, 623/2008 y 706/2010 requeridas al
Sptimo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito, por lo
que consider debidamente integrado el expediente en que se acta y
orden dar a conocer dicho acuerdo al Procurador General de la
Repblica para que en el plazo de treinta das emitiera el pedimento
correspondiente.
Mediante provedo de veintids de agosto de dos mil once, el
Presidente de este Alto Tribunal orden turnar el asunto al Ministro
Arturo Zaldvar Lelo de Larrea y enviar los autos a la Sala de su
adscripcin.
TERCERO. Trmite ante la Primera Sala. El Presidente de la
Primera Sala, por auto de veintinueve de agosto de dos mil once, tuvo
por recibidos los autos, determin que dicha Sala se avocara al
conocimiento del asunto y devolvi los autos al Ministro Arturo
Zaldvar Lelo de Larrea a fin de que elaborara el proyecto de
resolucin correspondiente.
Mediante certificacin de primero de septiembre del mismo ao,
el Secretario de Acuerdos de esta Primera Sala seal que el plazo
concedido al Procurador para exponer su parecer respecto a este
conflicto transcurrira del diecinueve de agosto al cuatro de octubre de
dos mil once.
Por oficio nmero DGC/DCC/1131/2011 presentado ante esta
Suprema Corte el veintitrs de septiembre de dos mil once, el Agente
del Ministerio Pblico de la Federacin, designado por el Director
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
General de Constitucionalidad de la Procuradura General de la
Repblica, sostuvo su pedimento en el sentido de que la contradiccin
de tesis denunciada es inexistente.
CUARTO. Envo del asunto al Pleno de la Suprema Corte.
Por acuerdo de veintisis de enero de dos mil doce, la Primera Sala
determin enviar el asunto al Tribunal Pleno dada la trascendencia del
tema de que se trata, por lo que a travs de provedo de treinta y uno
de enero de dos mil doce, el Ministro Presidente acord su radicacin
en Pleno.
C O N S I D E R A N D O:
PRIMERO. Competencia. El Pleno de la Suprema Corte de
Justicia de la Nacin es competente para conocer y resolver la
presente denuncia de contradiccin de tesis, de conformidad con lo
dispuesto por los artculos 107, fraccin XIII, de la Constitucin y 226,
fraccin II, de la Ley de Amparo publicada en el Diario Oficial de la
Federacin el dos de abril de dos mil trece, en relacin con la fraccin
VII del punto Segundo del Acuerdo General 5/2013, en virtud de que
se trata de una denuncia de contradiccin suscitada entre criterios de
Tribunales Colegiados de Circuito de distinto Circuito, en un tema que,
por su trascendencia debe ser conocido por el Tribunal Pleno.5
SEGUNDO. Legitimacin. La denuncia de contradiccin de
tesis proviene de parte legtima de conformidad con lo previsto por los
5
Al respecto, vase la tesis de rubro CONTRADICCIN DE TESIS ENTRE TRIBUNALES
COLEGIADOS DE DIFERENTE CIRCUITO. CORRESPONDE CONOCER DE ELLAS A LA
SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIN (INTERPRETACIN DEL ARTCULO 107,
FRACCIN XIII, PRR. SEGUNDO, DE LA CONSTITUCIN POLTICA DE LOS ESTADOS
UNIDOS MEXICANOS, REFORMADO MEDIANTE DECRETO PUBLICADO EN EL DIARIO
OFICIAL DE LA FEDERACIN EL 6 DE JUNIO DE 2011). [Dcima poca, Registro: 2001866,
Instancia: Primera Sala, Tesis Aislada, Fuente: Semanario Judicial de la Federacin y su Gaceta,
Libro XIII, Octubre de 2012, Tomo 2, Materia(s): Comn, Tesis: 1a. CXCIII/2012 (10a.), Pg. 1196].
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
artculos 107, fraccin XIII, constitucional y 227, fraccin II, de la Ley
de Amparo, toda vez que fue formulada por el autorizado de quien fue
parte en el juicio de amparo directo 1060/2008, asunto del que
resultaron dos de los criterios en contradiccin.
TERCERO.
Criterios
denunciados.
En
el
presente
considerando se dar cuenta de los criterios de los Tribunales
Colegiados que pudieran ser contradictorios.
I. Sentencias dictadas por el Sptimo Tribunal Colegiado en
Materia Civil del Primer Circuito en los amparos directos 344/2008
y 623/2008
En virtud de que ambas sentencias derivan de la misma cadena
procesal, a continuacin se exponen los hechos que dieron lugar al
juicio natural, el ter procesal que comprende el dictado de las dos
sentencias de amparo y las consideraciones esgrimidas por el Tribunal
Colegiado en dichas resoluciones.
1. Hechos del caso e ter procesal
********** demand de la Procuradura General de la
Repblica, la Agencia Federal de Investigacin, Interpol Mxico y la
Procuradura General de Justicia del Distrito Federal, entre otras
cosas, el pago del dao moral, el dao material y los perjuicios
ocasionados por dichas autoridades con motivo de su detencin,
deportacin y cancelacin de su visa estadounidense, al haberlo
confundido con una persona que tena orden de aprehensin en su
contra. El veintitrs de noviembre de dos mil siete, el juez de origen
conden de manera solidaria a las codemandadas.
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
En contra de dicha sentencia, las codemandadas interpusieron
recurso de apelacin, mismo que fue resuelto en el toca 178/2008 por
la Sptima Sala Civil del Tribunal Superior de Justicia del Distrito
Federal, mediante sentencia de diez de marzo de dos mil ocho en la
que se les absolvi de todas las prestaciones reclamadas.
Inconforme con la anterior resolucin, el actor present demanda
de amparo directo, radicada con el nmero 344/2008 por el Sptimo
Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito. El diez de julio
de dos mil ocho, el Tribunal Colegiado concedi el amparo al quejoso
para el efecto de que la Sala responsable dejara insubsistente el acto
reclamado y en su lugar dictara una nueva sentencia.
En cumplimiento a la ejecutoria de amparo, la Sala responsable
emiti sentencia el siete de agosto de dos mil ocho en el sentido de
confirmar la sentencia de primer grado y condenar a las apelantes al
pago de las costas en ambas instancias.
En contra de dicha determinacin, las terceras perjudicadas
promovieron juicio de amparo directo, mismo que qued radicado
nuevamente ante el Sptimo Tribunal Colegiado en Materia Civil del
Primer Circuito con el nmero 623/2208. El veintitrs de octubre de
dos mil ocho, el Tribunal Colegiado neg el amparo con apoyo en las
consideraciones que se sealarn en el apartado siguiente.
2. Argumentacin de las sentencias
a) Amparo directo 344/2008
Con apoyo en la tesis de la Suprema Corte de Justicia de la
Nacin de rubro TRATADOS INTERNACIONALES. SE UBICAN
JERRQUICAMENTE POR ENCIMA DE LAS LEYES FEDERALES Y
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
EN UN SEGUNDO PLANO RESPECTO DE LA CONSTITUCIN
FEDERAL,6 puede decirse que los tratados internacionales forman
parte de la Ley Suprema de la Unin en un plano jerrquico superior al
de las leyes federales e inferior a la Constitucin.
Los tratados internacionales en materia de derechos humanos
suscritos por el Estado mexicano pueden ser invocados para analizar
los casos en que se aleguen violaciones a los derechos humanos,
pues los mismos pertenecen a nuestro sistema jurdico y existe un
compromiso internacional del Estado para hacer efectivos los
derechos humanos reconocidos en los mismos. Esta consideracin
encuentra sustento en el principio de que las leyes se hicieron para
servir al hombre, por lo que es posible llevar a cabo todas las acciones
necesarias para restituir o resarcir a las personas en el goce de sus
derechos.
b) Amparo directo 623/2008
Los tratados internacionales suscritos por Mxico obligan a todas
las autoridades a llevar a cabo los actos necesarios para cumplir con
las obligaciones asumidas en la implementacin de las medidas que
hagan efectivos los derechos humanos previstos en los mismos. De
igual manera, como dichos tratados forman parte de la Ley Suprema
de la Unin, se debe aplicar de manera obligatoria el principio pro
persona, mismo que establece que la interpretacin jurdica siempre
debe
buscar
el
mayor
beneficio
para
la
persona.
Estas
consideraciones se apoyan en las tesis de rubros PRINCIPIO PRO
HOMINE. SU APLICACIN ES OBLIGATORIA y PRINCIPIO PRO
HOMINE. SU APLICACIN.
6
Novena poca; Registro: 192867; Instancia: Pleno; Tesis Aislada; Fuente: Semanario
Judicial de la Federacin y su Gaceta; Localizacin: Tomo X, Noviembre de 1999; Materia(s):
Constitucional; Tesis: P. LXXVII/99; Pg. 46.
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Las decisiones de la Corte Interamericana, misma que cuenta
con competencia contenciosa, sirven como criterios orientadores para
la interpretacin y cumplimiento de las disposiciones protectoras de los
derechos humanos.
3. Criterios derivados de las sentencias
a) Amparo directo 344/2008
DERECHOS
HUMANOS,
LOS
TRATADOS
INTERNACIONALES SUSCRITOS POR MXICO SOBRE LOS.
ES POSIBLE INVOCARLOS EN EL JUICIO DE AMPARO AL
ANALIZAR LAS VIOLACIONES A LAS GARANTAS
INDIVIDUALES QUE IMPLIQUEN LA DE AQULLOS. Los
artculos 1o., 133, 103, fraccin I, y 107 de la Constitucin Poltica
de los Estados Unidos Mexicanos, establecen respectivamente:
que todo individuo gozar de las garantas que ella otorga; que
las leyes del Congreso de la Unin, que emanen de ella, y los
tratados acordes a la misma, sern la Ley Suprema de toda la
Unin; que los tribunales de la Federacin resolvern toda
controversia que se suscite por leyes o actos de la autoridad que
violen las garantas individuales; y, las bases, los procedimientos
y las formas para la tramitacin del juicio de amparo. Por su
parte, la Suprema Corte de Justicia de la Nacin ubic a los
tratados internacionales por encima de las leyes federales y por
debajo de la Constitucin, segn la tesis del rubro: "TRATADOS
INTERNACIONALES. SE UBICAN JERRQUICAMENTE POR
ENCIMA DE LAS LEYES FEDERALES Y EN UN SEGUNDO
PLANO RESPECTO DE LA CONSTITUCIN FEDERAL." (IUS
192867). De ah que si en el amparo es posible conocer de actos
o leyes violatorios de garantas individuales establecidas
constitucionalmente, tambin pueden analizarse los actos y leyes
contrarios a los tratados internacionales suscritos por Mxico, por
formar parte de la Ley Suprema de toda la Unin en el nivel que
los ubic la Corte. Por lo tanto, pueden ser invocados al resolver
sobre la violacin de garantas individuales que involucren la de
los derechos humanos reconocidos en los tratados
internacionales suscritos por Mxico.
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
b) Amparo directo 623/2008
JURISPRUDENCIA
INTERNACIONAL.
SU
UTILIDAD
ORIENTADORA EN MATERIA DE DERECHOS HUMANOS.
Una vez incorporados a la Ley Suprema de toda la Unin los
tratados internacionales suscritos por Mxico, en materia de
derechos humanos, y dado el reconocimiento de la competencia
contenciosa de la Corte Interamericana de Derechos Humanos,
es posible invocar la jurisprudencia de dicho tribunal
internacional como criterio orientador cuando se trate de la
interpretacin y cumplimiento de las disposiciones protectoras
de los derechos humanos.
II. Sentencia dictada por el Primer Tribunal Colegiado en Materias
Administrativas y de Trabajo del Dcimo Primer Circuito en el
amparo directo 1060/2008
A continuacin se exponen los hechos que dieron lugar al juicio
natural, el ter procesal seguido hasta la sentencia de amparo y las
consideraciones esgrimidas por el Tribunal Colegiado en esta ltima.
1. Hechos del caso e ter procesal
********** present demanda de nulidad ante el Tribunal de
Justicia Administrativa de Michoacn en contra de las siguientes actos
y autoridades: (i) la Direccin de Seguridad Pblica y Trnsito del
Estado de Michoacn por la imposicin de una multa de treinta pesos
y la detencin arbitraria, as como el registro de la detencin en la lista
de los arrestados que se lleva en Barandilla; (ii) la Secretara de
Finanzas y Administracin del Estado de Michoacn por el cobro de la
multa citada; y (iii) el Gobernador del Estado de Michoacn por la
omisin de expedir reglamentos relativos a garantizar la observancia
10
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
de los artculos 7 y 8 de la Convencin Americana sobre Derechos
Humanos en los procedimientos administrativos sancionadores.
El magistrado instructor de la Segunda Ponencia del Tribunal de
Justicia Administrativa de Michoacn determin que en el caso
concreto se actualizaba la causal de improcedencia prevista en el
artculos 2, segundo prrafo, en relacin con el 205, fraccin X, del
Cdigo de Justicia Administrativa del Estado de Michoacn, ya que los
actos impugnados tenan su origen en actos de seguridad pblica que,
por tanto, estaban excluidos de regulacin en el citado cdigo y, en
consecuencia, de la competencia del tribunal.
En contra de la anterior resolucin, el actor interpuso recurso de
reconsideracin ante la citada Sala, la que confirm el acuerdo
impugnado. Inconforme, ********** present demanda de amparo
directo.
2. Argumentacin de la sentencia
Cuando un tratado internacional ha sido ratificado por el Estado
mexicano, existe la obligacin de adaptarlo al derecho interno mediante
un procedimiento especial. As, una vez realizado este procedimiento,
lo pactado en el tratado queda automticamente incorporado al
derecho interno mexicano. En esta lnea, cuando se trate de un
conflicto que verse sobre derechos humanos, los tratados suscritos
por el Estado mexicano que los regulan, deben ubicarse propiamente
a nivel de la Constitucin porque dichos instrumentos internacionales
deben concebirse como una extensin de lo previsto por ella respecto
a los derechos fundamentales.
11
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Las autoridades mexicanas quedan vinculadas a invocar la
jurisprudencia de los tribunales internacionales cuando se trate de la
interpretacin y cumplimiento de las disposiciones protectoras de los
derechos humanos, en virtud de que el Estado en su conjunto asumi
un compromiso internacional al ratificar el tratado internacional y de
que el mismo ha sido incorporado a la Ley Suprema de la Unin.
Al respecto, se comparte la tesis aislada del Sptimo Tribunal
Colegiado
en
Materia
JURISPRUDENCIA
Civil
del
Primer
INTERNACIONAL.
Circuito
SU
de
rubro
UTILIDAD
ORIENTADORA EN MATERIA DE DERECHOS HUMANOS. As,
dado que Mxico acept la Convencin Americana sobre Derechos
Humanos,
tambin
reconoci
la
interpretacin
que
de
dicha
convencin realiza la Corte Interamericana de Derechos Humanos, de
tal manera que todos los tribunales del Estado Mexicano quedan
obligados a aplicar los tratados internacionales y la jurisprudencia
emitida por la Corte Interamericana de Derechos Humanos, entre otros
organismos, lo que conlleva a sustentar que deben realizar un control
difuso de convencionalidad al resolver los asuntos sometidos a su
competencia.
El principio pro homine es un criterio hermenutico que coincide
con el rasgo fundamental de los derechos humanos y que implica que
debe acudirse a la norma ms amplia o a la interpretacin ms
extensiva cuando se trata de derechos protegidos y, por el contrario, a
la norma o a la interpretacin ms restringida, cuando se trata de
establecer lmites a su ejercicio.
12
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
La
doctrina
ha
establecido
dos
tipos
de
control
de
convencionalidad: en sede internacional y en sede interna. Ambos
implican el examen de confrontacin normativo (material) del derecho
interno con la norma internacional, alrededor de unos hechos -accin u
omisin- internacionalmente ilcitos. As, el juicio de convencionalidad
puede realizarse respecto de la accin o de la omisin del legislador.
3. Criterios derivados de la sentencia
TRATADOS
INTERNACIONALES.
CUANDO
LOS
CONFLICTOS SE SUSCITEN EN RELACIN CON
DERECHOS HUMANOS, DEBEN UBICARSE A NIVEL DE LA
CONSTITUCIN. Los tratados o convenciones suscritos por el
Estado mexicano relativos a derechos humanos, deben ubicarse
a nivel de la Constitucin Poltica de los Estados Unidos
Mexicanos, porque dichos instrumentos internacionales se
conciben como una extensin de lo previsto en esa Ley
Fundamental respecto a los derechos humanos, en tanto que
constituyen la razn y el objeto de las instituciones. Por lo que
los principios que conforman el derecho subjetivo pblico, deben
adecuarse a las diversas finalidades de los medios de defensa
que prev la propia Constitucin y de acuerdo con su artculo
133 las autoridades mexicanas deben respetarlos, por lo que
bajo ninguna circunstancia pueden ser ignorados por ellos al
actuar de acuerdo a su mbito competencial.
CONTROL DE CONVENCIONALIDAD EN SEDE INTERNA.
LOS TRIBUNALES MEXICANOS ESTN OBLIGADOS A
EJERCERLO. Tratndose de los derechos humanos, los
tribunales del Estado mexicano como no deben limitarse a
aplicar slo las leyes locales, sino tambin la Constitucin, los
tratados o convenciones internacionales conforme a la
jurisprudencia emitida por cualesquiera de los tribunales
internacionales que realicen la interpretacin de los tratados,
pactos, convenciones o acuerdos celebrados por Mxico; lo cual
obliga a ejercer el control de convencionalidad entre las normas
jurdicas internas y las supranacionales, porque ste implica
acatar y aplicar en su mbito competencial, incluyendo las
legislativas, medidas de cualquier orden para asegurar el
respeto de los derechos y garantas, a travs de polticas y leyes
que los garanticen.
13
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
CUARTO. Anlisis de los criterios denunciados. Para poder
determinar si existe una contradiccin de tesis debe verificarse lo
siguiente: (a) que los rganos contendientes sostengan tesis
contradictorias, debindose entender por tesis el criterio adoptado con
arbitrio judicial y a travs de argumentaciones lgico-jurdicas para
justificar una determinada resolucin; y (b) que los criterios sean
discrepantes sobre un mismo punto de derecho, independientemente
de que las cuestiones fcticas que lo originan no sean iguales.7
De acuerdo a lo anterior, el Tribunal Pleno de esta Suprema
Corte de Justicia de la Nacin considera que en el caso existe la
contradiccin de tesis denunciada, de conformidad con las
consideraciones que se exponen a continuacin.
Los Tribunales Colegiados contendientes analizaron en los
diversos amparos directos sometidos a su consideracin, los
siguientes puntos jurdicos: (1) la posicin jerrquica de los tratados
internacionales en materia de derechos humanos en relacin con la
Constitucin; (2) el carcter de la jurisprudencia en materia de
derechos humanos emitida por la Corte Interamericana de Derechos
Humanos; y (3) el control de convencionalidad.
En relacin con el punto (1), el Sptimo Tribunal Colegiado en
Materia Civil del Primer Circuito sostuvo en el amparo directo
344/2008 que dichos tratados se encuentran por encima de las leyes
7
CONTRADICCIN DE TESIS. EXISTE CUANDO LAS SALAS DE LA SUPREMA
CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIN O LOS TRIBUNALES COLEGIADOS DE CIRCUITO
ADOPTAN EN SUS SENTENCIAS CRITERIOS JURDICOS DISCREPANTES SOBRE UN
MISMO PUNTO DE DERECHO, INDEPENDIENTEMENTE DE QUE LAS CUESTIONES
FCTICAS QUE LO RODEAN NO SEAN EXACTAMENTE IGUALES [Novena poca; Registro:
164120; Instancia: Pleno; Tesis jurisprudencial; Fuente: Semanario Judicial de la Federacin y su
Gaceta; Localizacin: Tomo XXXII; Agosto de 2010; Materia(s): Comn; Tesis: P./J. 72/2010; Pg.
7].
14
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
federales y por debajo de la Constitucin. Si bien en dicha resolucin
manifest compartir la tesis emitida por el Tribunal Pleno de esta
Suprema Corte, de rubro TRATADOS INTERNACIONALES. SE
UBICAN JERRQUICAMENTE POR ENCIMA DE LAS LEYES
FEDERALES Y EN UN SEGUNDO PLANO RESPECTO DE LA
CONSTITUCIN FEDERAL, slo lo hizo para para utilizar ese
criterio como premisa de las consideraciones que posteriormente
esgrimi para sustentar su posicin en el sentido de que los tratados
internacionales en materia de derechos humanos se ubican
jerrquicamente por debajo de la Constitucin, tema que no haba
sido expresamente abordado por esta Suprema Corte.
Por otro lado, el Primer Tribunal Colegiado en Materias
Administrativa y de Trabajo del Dcimo Primer Circuito seal en el
amparo directo 1060/2008 que cuando se trate de un conflicto que
verse sobre derechos humanos, los tratados o convenciones
internacionales suscritos por el Estado Mexicano deben ubicarse
propiamente a nivel de la Constitucin. En esta lnea, emiti la tesis
de
rubro
TRATADOS
INTERNACIONALES.
CUANDO
LOS
CONFLICTOS SE SUSCITEN EN RELACIN CON DERECHOS
HUMANOS, DEBEN UBICARSE A NIVEL DE LA CONSTITUCIN.
De lo anterior se desprende que ambos tribunales se
pronunciaron respecto a la posicin jerrquica de los tratados
internacionales en materia de derechos humanos en relacin con la
Constitucin, siendo que el Sptimo Tribunal Colegiado en Materia
Civil del Primer Circuito sostuvo que los mismos se ubican debajo de
la Constitucin, mientras que el Primer Tribunal Colegiado en Materias
Administrativa y de Trabajo del Dcimo Primer Circuito consider que
estn al mismo nivel.
15
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
En relacin con el punto (2), referente al carcter de la
jurisprudencia en materia de derechos humanos emitida por la Corte
Interamericana de Derechos Humanos, en el amparo directo
623/2008 el Sptimo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer
Circuito argument que es posible invocar la jurisprudencia de la
Corte Interamericana de Derechos Humanos como criterio orientador
cuando se trate de la interpretacin y cumplimiento de disposiciones
protectoras de los derechos humanos. En consecuencia, este criterio
fue recogido en la tesis aislada de rubro JURISPRUDENCIA
INTERNACIONAL. SU UTILIDAD ORIENTADORA EN MATERIA DE
DERECHOS HUMANOS.
Al respecto, si bien el Primer Tribunal Colegiado en Materias
Administrativa y de Trabajo del Dcimo Primer Circuito seal
compartir esa tesis aislada del Sptimo Tribunal Colegiado en Materia
Civil del Primer Circuito, al mismo tiempo esgrimi consideraciones
acerca de que la jurisprudencia internacional en materia de derechos
humanos es obligatoria, pues entendi el carcter orientador de la
misma de diversa forma.
En efecto, dicho Tribunal seal que las autoridades del Estado
mexicano tienen la ineludible obligacin de observar y aplicar en su
mbito competencial interno adems de las legislativas medidas de
cualquier otro orden para asegurar el respeto de los derechos y
garantas, no slo de la Constitucin y de sus normativas internas sino
tambin de las convenciones internacionales de las que Mxico es
parte y de las interpretaciones que de sus clusulas llevaron a cabo
los organismos internacionales. As, de las afirmaciones anteriores es
posible advertir que el Primer Tribunal Colegiado en Materias
Administrativa y de Trabajo del Dcimo Primer Circuito considera a la
jurisprudencia internacional en materia de derechos humanos como
16
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
un criterio obligatorio, el cual debe ser aplicado por todas las
autoridades con funciones materialmente jurisdiccionales.
En tal sentido, es posible sealar que el Sptimo Tribunal
Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito consider a la
jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos
como un criterio orientador, mientras que el Primer Tribunal Colegiado
en Materias Administrativa y de Trabajo del Dcimo Primer Circuito le
otorg a los precedentes de dicho tribunal y a los de cualquier otro
organismo internacional de derechos humanos un carcter obligatorio.
No obstante, la contradiccin de criterios debe limitarse a establecer el
carcter de la jurisprudencia emitida por la Corte Interamericana de
Derechos Humanos, ya que el Sptimo Tribunal Colegiado no se
pronunci respecto al valor de los precedentes emitidos por otros
organismos internacionales.
Finalmente, en el tema del control de convencionalidad
identificado en el punto (3), el Primer Tribunal Colegiado en Materias
Administrativa y de Trabajo del Dcimo Primer Circuito abund
respecto al deber que tienen todas las autoridades de cumplir y hacer
cumplir los tratados internacionales en materia de derechos humanos
suscritos por Mxico, por lo que de acuerdo a dichas consideraciones,
los tribunales del Estado mexicano no deben limitarse a aplicar slo
las leyes locales, sino tambin los tratados o convenciones
internacionales, lo cual obliga a ejercer el control de convencionalidad
entre las normas jurdicas internas y las contenidas en tratados
internacionales.
Por su parte, el Sptimo Tribunal Colegiado en Materia Civil del
Primer Circuito, al resolver el amparo directo 344/2008, nicamente
se pronunci respecto a la posibilidad de plantear a travs del juicio
17
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
de amparo violaciones a los derechos contenidos en los tratados
internacionales suscritos por Mxico, por lo que al igual que el Primer
Tribunal Colegiado en Materias Administrativa y de Trabajo del
Dcimo Primer Circuito sostuvo la necesidad de que los tribunales
federales ejerzan el denominado control de convencionalidad, sin
pronunciarse sobre si dicho control debe ser difuso, esto es, si todos
los tribunales del Estado mexicano deben ejercer el control de
convencionalidad entre las normas jurdicas internas y las de origen
internacional. De hecho, puede inferirse que su pronunciamiento se
refiere a los rganos de control concentrado.
As, ambos tribunales sostuvieron la pertinencia del control de
convencionalidad en sede interna, el Primer Tribunal Colegiado en
Materias Administrativa y de Trabajo del Dcimo Primer Circuito
seal que ste debe ser ejercido por todas las autoridades
jurisdiccionales, mientras que el Sptimo Tribunal Colegiado en
Materia Civil del Primer Circuito slo analiz si es posible plantear
violaciones a los derechos humanos contenidos en tratados
internacionales a travs del juicio de amparo. En consecuencia, no
existe un punto de toque entre las consideraciones sustentadas por
ambos tribunales respecto al tema del control de convencionalidad.
De acuerdo con las consideraciones anteriores, puede llegarse a
la conclusin de que s existe la contradiccin de tesis denunciada
y que la litis de la misma consiste en determinar dos cuestiones: (i) la
posicin jerrquica de los tratados internacionales en materia de
derechos humanos en relacin con la Constitucin; y (ii) el carcter de
la jurisprudencia en materia de derechos humanos emitida por la Corte
Interamericana de Derechos Humanos.
18
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Al respecto, cabe hacer un par de precisiones. Por un lado, si
bien en el expediente varios 912/2010 se esgrimieron diversas
consideraciones acerca de la obligatoriedad de las sentencias
condenatorias al Estado mexicano de la Corte Interamericana de
Derechos Humanos, tal decisin no constituye jurisprudencia por lo
que sigue siendo relevante resolver tal cuestin. Y por otro lado, en
dicha resolucin no se resolvi el tema de la jerarqua de los tratados
en materia de derechos humanos. Consecuentemente, el estudio del
presente asunto permitir la construccin de criterios jurisprudenciales
con respecto al carcter orientador u obligatorio de la jurisprudencia
emitida
por
la
Corte
Interamericana
permitir
realizar
pronunciamientos novedosos respecto a la jerarqua de los tratados
internacionales en materia de derechos humanos.
Por ltimo, este Tribunal Pleno no pasa por alto el hecho de que
los casos que motivaron la presente contradiccin de tesis fueron
resueltos
por
los
Tribunales
Colegiados
aplicando
el
marco
constitucional que se encontraba vigente antes de que se aprobaran
las reformas constitucionales en materia de derechos humanos y juicio
de amparo de junio de dos mil once. En este sentido, si bien los
criterios en pugna no se establecieron tomando en cuenta los
trascendentales cambios normativos que introdujeron las citadas
reformas constitucionales, al incidir la materia de la presente
contradiccin en un tema directamente vinculado con las proteccin de
los derechos humanos reconocidos por la Constitucin, el Pleno de
esta Suprema Corte estima pertinente resolverla a partir del marco
constitucional vigente, contribuyendo as a generar un criterio que
abone a la seguridad jurdica en un tema de especial trascendencia
para todas las personas.
19
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Adems, lo anterior es concordante con la jurisprudencia del
Pleno en el sentido de que slo los preceptos constitucionales pueden
regir el pasado, por lo que al versar la presente contradiccin de tesis
sobre la jerarqua constitucional de los tratados internacionales en
materia de derechos humanos y no sobre un tema de mera legalidad,
resulta procedente emplear el nuevo marco constitucional para
resolverla. Resulta aplicable la jurisprudencia del Pleno de rubro
RETROACTIVIDAD
DE
LA
LEY,
PRECEPTOS
CONSTITUCIONALES NO SON IMPUGNABLES POR,8 as como la
tesis aislada de la Cuarta Sala de este Alto Tribunal de rubro
RETROACTIVIDAD DE LOS PRECEPTOS QUE FIGURAN EN LA
CONSTITUCIN.9
QUINTO. Estudio de fondo. Debe prevalecer con carcter de
jurisprudencia lo sustentado por el Pleno de esta Suprema Corte de
Justicia de la Nacin, de acuerdo con las consideraciones que se
exponen en este considerando. Como se desprende del considerando
anterior, la presente contradiccin versa sobre dos cuestiones jurdicas
distintas, por lo cual este Tribunal Pleno abordar los estudios
correspondientes en dos apartados independientes, para efectos de
aportar mayor claridad en la exposicin.
I. La posicin jerrquica de los tratados internacionales en
materia de derechos humanos en relacin con la Constitucin
Para resolver este punto de la presente contradiccin, en primer lugar
se har una reconstruccin de los criterios que este Tribunal Pleno ha
emitido en torno al tema de la jerarqua de tratados internacionales en
8
Quinta poca, Registro: 900446, Instancia: Pleno, Jurisprudencia, Fuente: Apndice
2000, Localizacin: Ap. 2000, Materia(s): Constitucional, Tesis: 446, Pg. 515.
9
Quinta poca, Registro: 383313, Instancia: Cuarta Sala, Tesis Aislada, Fuente:
Semanario Judicial de la Federacin, Localizacin: Tomo XLIII, Materia(s): Constitucional, Tesis:
Pg. 665.
20
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
el orden jurdico nacional, para posteriormente explicar las razones por
las cuales el enfoque tradicional del problema en trminos de la
jerarqua de fuentes es insatisfactorio para resolver la cuestin
sometida a consideracin de esta Suprema Corte, que tiene que ver
ms bien con la pregunta de cmo se relacionan las normas de
derechos humanos contenidas en tratados internacionales con la
Constitucin. Finalmente, se desarrollar un nuevo enfoque que d
cuenta del contenido de las reformas constitucionales publicadas en el
Diario Oficial de la Federacin los das seis y diez de junio de dos mil
once, en aras de otorgar una mayor y ms efectiva tutela a los
derechos humanos reconocidos por el artculo 1 constitucional.
1. Criterios jurisprudenciales sobre la jerarqua normativa de los
tratados internacionales
Tanto doctrinal como jurisprudencialmente existe un acuerdo
respecto a que, entre otras cuestiones, el artculo 133 de la
Constitucin reconoce el principio de supremaca constitucional.
Adicionalmente, esta Suprema Corte de Justicia de la Nacin ha
sostenido histricamente que la primera parte del artculo en comento
tambin determina el lugar que los tratados internacionales ocupan
dentro del sistema de fuentes del orden jurdico mexicano. El texto del
precepto constitucional en comento es el siguiente:
Artculo 133. Esta Constitucin, las leyes del Congreso de la Unin
que emanen de ella y todos los Tratados que estn de acuerdo con la
misma, celebrados y que se celebren por el Presidente de la
Repblica, con aprobacin del Senado, sern la Ley Suprema de
toda la Unin.
Como se muestra a continuacin, la doctrina jurisprudencial de
esta Suprema Corte sobre el sistema de fuentes, derivada de la
interpretacin del artculo 133, no ha gozado de estabilidad. En el caso
21
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
especfico de los tratados internacionales, los criterios del Tribunal
Pleno en torno a su jerarqua en el orden jurdico mexicano han
experimentado una gran evolucin.
Un primer pronunciamiento tuvo lugar en mil novecientos
noventa y dos, con motivo de la resolucin dictada en el amparo en
revisin 2069/91. En dicha ocasin, la Suprema Corte de Justicia de
la Nacin coloc a los tratados internacionales en el mismo nivel que
las leyes federales, sealando que ambos cuerpos normativos ocupan
un rango inmediatamente inferior a la Constitucin y que, en
consecuencia, uno no puede ser empleado como parmetro de validez
o regularidad del otro. Con base en los razonamientos anteriores, se
aprob la tesis aislada de rubro LEYES FEDERALES Y TRATADOS
INTERNACIONALES.
TIENEN
LA
MISMA
JERARQUA
NORMATIVA.10
El segundo pronunciamiento dentro de esta lnea jurisprudencial
ocurri con motivo del estudio del amparo en revisin 1475/98. En
dicho asunto, el Tribunal Pleno estableci que los tratados
internacionales que estn de acuerdo con la Constitucin, por cumplir
con los requisitos formales y materiales para tal efecto,11 se ubican
jerrquicamente por encima de las leyes federales y locales. Este
pronunciamiento dio lugar a la emisin de la tesis aislada de rubro
TRATADOS
INTERNACIONALES.
SE
UBICAN
JERRQUICAMENTE POR ENCIMA DE LAS LEYES FEDERALES Y
EN UN SEGUNDO PLANO RESPECTO DE LA CONSTITUCIN
10
Octava poca, Registro: 205596, Instancia: Pleno; Tesis Aislada; Fuente: Gaceta del
Semanario Judicial de la Federacin; Localizacin: Nm. 60, Diciembre de 1992; Materia(s):
Constitucional; Tesis: P. C/92, pg. 27.
11
Sobre cules son dichos requisitos constitucionales de incorporacin, esta Suprema
Corte sostuvo que [e]s menester que satisfagan dos requisitos formales y uno de fondo: los
primeros hacen consistir en que el tratado est o sea celebrado por el Presidente de la Repblica y
que sea aprobado por el Senado. El requisito de fondo consiste en la adecuacin de la convencin
internacional con el texto de la propia Ley Fundamental.
22
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
FEDERAL, lo que implic la interrupcin del precedente antes
mencionado.
Finalmente, un tercer pronunciamiento se emiti con motivo de la
resolucin del amparo en revisin 120/2002, dentro del cual el
Tribunal Pleno sostuvo en sntesis lo siguiente: (i) la existencia de un
orden jurdico superior, de carcter nacional, integrado por la
Constitucin, los tratados internacionales y las leyes generales; (ii) la
supremaca de los tratados internacionales frente las leyes generales,
federales y locales; y (iii) la existencia de una visin internacionalista
de la Constitucin, por lo que de acuerdo a la Convencin de Viena
sobre el Derecho de los Tratados, el Estado mexicano no puede
invocar su derecho interno como excusa para el incumplimiento de las
obligaciones contradas frente a otros actores internacionales,12 pues
todo tratado en vigor obliga a las partes y debe ser cumplido por ellas
de buena fe.13 De lo anterior deriv la tesis de rubro TRATADOS
INTERNACIONALES. SON PARTE INTEGRANTE DE LA LEY
SUPREMA DE LA UNIN Y SE UBICAN JERRQUICAMENTE POR
ENCIMA DE LAS LEYES GENERALES, FEDERALES Y LOCALES.
INTERPRETACIN DEL ARTCULO 133 CONSTITUCIONAL.14
El precedente antes descrito constituye el ltimo criterio del
Tribunal Pleno respecto a la jerarqua de los tratados internacionales
12
Suscrita por Mxico el veintitrs de mayo de mil novecientos sesenta y nueve y aprobada
por el Senado el veintinueve de diciembre de mil novecientos setenta y dos, publicada
originalmente en el Diario Oficial de la Federacin, el catorce de febrero de mil novecientos setenta
y cinco y, en su ltima versin, el veintiocho de abril de mil novecientos ochenta y ocho.
Artculo 27. 1. Un Estado parte en un tratado no podr invocar las disposiciones de su
derecho interno como justificacin del incumplimiento del tratado. [].
13
Artculo 26. Pacta sunt servanda. Todo tratado en vigor obliga a las partes y debe ser
cumplido por ellas de buena fe.
14
Novena poca; Registro: 172650; Instancia: Pleno; Tesis Aislada; Fuente: Semanario
Judicial de la Federacin y su Gaceta, Localizacin: Tomo XXV, Abril de 2007; Materia(s):
Constitucional, Tesis: P. IX/2007, Pg. 6. Este criterio no cont alcanz la votacin requerida para
integrar jurisprudencia.
23
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
en el orden jurdico nacional.15 En este sentido, la doctrina
jurisprudencial vigente de esta Suprema Corte de Justicia de la Nacin
considera que el artculo 133 constitucional contiene diversas normas,
dentro de las cuales destacan la que constituye el postulado principal
del principio de supremaca constitucional y la que sienta los
parmetros bajo los cuales se ha construido la jerarqua normativa del
ordenamiento jurdico mexicano.
Lo antes expuesto evidencia que, para este Alto Tribunal, del
artculo 133 constitucional se desprende una nocin de jerarqua
formal de las normas que integran el sistema de fuentes, segn la cual
los tratados internacionales se encuentran jerrquicamente por debajo
de la Constitucin y por encima del resto de normas jurdicas que
forman parte del entramado normativo mexicano.
2. Las limitaciones del criterio jerrquico
Una vez expuesto lo anterior, es pertinente recordar que la
presente contradiccin de criterios problematiza la respuesta que esta
Suprema Corte ha dado a la cuestin de la jerarqua de los tratados
internacionales, al cuestionar si la misma resulta aplicable a los
tratados de derechos humanos. Para este Tribunal Pleno, la doctrina
jurisprudencial desarrollada en torno a la jerarqua de los tratados
internacionales resulta insatisfactoria por dos cuestiones: una
relacionada con los alcances de los precedentes que sostienen dicha
doctrina; y otra vinculada con la necesidad de adoptar un nuevo
enfoque para responder el problema aducido, dando cuenta del nuevo
contenido del artculo 1 constitucional.
15
Este Tribunal Pleno no soslaya la existencia de otros pronunciamientos que
tangencialmente abordan temas relacionados con el tema que ahora se esboza, sin embargo, no
se citan por no constituir criterios que hayan modificado la lnea jurisprudencial descrita.
24
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
En cuanto a los alcances de los precedentes, las dos sentencias
que dieron origen a las tesis que constituyen el fundamento de la
actual jerarqua de los tratados internacionales, matizaron los criterios
sostenidos en ellas, de tal manera que dichas conclusiones no
necesariamente fueran aplicables a los tratados de derechos
humanos. Al respecto, resulta revelador que en ambas sentencias se
contempl la posibilidad de que los derechos humanos de fuente
internacional pudieran convertirse incluso en una extensin misma de
la Constitucin.
En esa lnea, en la sentencia del primer precedente del Tribunal
Pleno en el que seal la superioridad de los tratados internacionales
frente a las leyes federales y locales, el amparo en revisin
1475/98,16 se argument que si las normas de derechos humanos
previstas
en
tratados
internacionales
amplan
los
derechos
fundamentales, podra considerarse que estn al mismo nivel de la
Constitucin:
Puede darse el caso de convenios internacionales que amplen las
garantas individuales o sociales y que por no estar dentro de las
normas constitucionales no podran ser aplicadas a nuestro derecho.
En este caso conviene analizar las caractersticas de la norma
internacional que se pretende aplicar y en funcin de ella atender a la
finalidad de las disposiciones constitucionales de que se trata. En el
ejemplo, es evidente que si el tratado obliga a ampliar la esfera de
libertades de los gobernados o compromete al Estado a realizar
determinadas acciones en beneficio de grupos humanos
tradicionalmente
dbiles,
deben
considerarse
como
constitucionales.
Posteriormente, en la sentencia del amparo en revisin
120/200217 se sostuvo lo siguiente:
16
Resuelto por el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nacin por unanimidad de
diez votos, mediante sentencia de once de mayo de mil novecientos noventa y nueve, ponencia del
Ministro Humberto Romn Palacios, foja 60.
17
Resuelto por el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nacin por mayora seis
votos, mediante sentencia de trece de febrero de dos mil siete, ponencia del Ministro Sergio
Salvador Aguirre Anguiano, fojas 170 y 171.
25
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
esta Suprema Corte no se ha pronunciado respecto a la jerarqua de
aquellos tratados internacionales cuyo contenido est referido a
derechos humanos, caso en el cual, pudiera aceptarse que la
jerarqua de stos corresponda a la de la Constitucin Federal
misma, al concebirse dichos instrumentos internacionales como una
extensin de lo previsto por sta.
De lo anterior se desprende que ambos precedentes marcan
lmites claros respecto al alcance que el criterio de jerarqua puede
llegar a tener al momento de aplicarse a normas de derechos
humanos reconocidos en tratados internacionales. No obstante, la
integracin de dichas normas al nivel constitucional se apunta como
una conclusin con la que ninguna de las dos sentencias se
compromete del todo, aunque bien podra entenderse que esa era su
intencin. En esta lnea, resulta de especial relevancia la presente
contradiccin, pues los criterios emitidos por el Primer Tribunal
Colegiado en Materias Administrativa y de Trabajo del Dcimo Primer
Circuito y el Sptimo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer
Circuito plantean la necesidad de emitir un criterio que atienda con
claridad la distincin expuesta en las lneas precedentes.
Hasta aqu resulta evidente que esta Suprema Corte de Justicia
de la Nacin ha desarrollado un claro enfoque segn el cual del
artculo 133 constitucional se desprende, como una consecuencia del
principio
de
supremaca
constitucional,
que
los
tratados
internacionales se encuentran en el nivel inmediatamente inferior a la
Constitucin. Ahora bien, como se sostuvo anteriormente, el criterio de
jerarqua resulta insatisfactorio para dar cuenta de lo ocurrido con las
normas de derechos humanos previstas en tratados internacionales,
por lo que es necesario apuntar que esta problemtica ha adquirido
una nueva dimensin a raz de las reformas constitucionales
publicadas en el Diario Oficial de la Federacin los das seis y el diez
26
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
de junio de dos mil once, las cuales modificaron el primer prrafo del
artculo 1 constitucional.
De una simple lectura del precepto se desprende claramente que
el ordenamiento jurdico mexicano reconoce los derechos humanos
provenientes de dos fuentes: la Constitucin y los tratados
internacionales de los que el Estado mexicano sea parte.18 En este
punto es necesario realizar dos precisiones conceptuales.
La primera se encuentra dirigida a destacar que la Constitucin
incluye dentro de su catlogo a las normas de derechos humanos
reconocidas en tratados internacionales, mas no al resto de normas
comprendidas en dichos instrumentos internacionales. Aunque puede
parecer una cuestin menor, lo cierto es que se trata de una distincin
de gran importancia. En este sentido, es posible afirmar que a la luz
del
nuevo
texto
constitucional
la
distincin
entre
tratados
internacionales de derechos humanos y tratados internacionales no
es determinante para resolver la presente contradiccin.
Es cierto que tradicionalmente se han distinguido los tratados
internacionales en materia de derechos humanos, cuyo objeto es
precisamente el desarrollo de los derechos humanos y sus garantas,19
18
As lo ha reconocido la Primera Sala de este Alto Tribunal en la jurisprudencia de rubro
PRINCIPIO PRO PERSONA. CRITERIO DE SELECCIN DE LA NORMA DE DERECHO
FUNDAMENTAL APLICABLE [Dcima poca, Registro: 2002000, Instancia: Primera Sala,
Jurisprudencia, Fuente: Semanario Judicial de la Federacin y su Gaceta, Libro XIII, Octubre de
2012, Tomo 2, Materia(s): Constitucional, Tesis: 1a./J. 107/2012 (10a.), pg. 799].
19
Adicionalmente, es pertinente apuntar que cuando los Estados suscriben un tratado en
materia de derechos humanos se comprometen no slo frente a la comunidad internacional, sino
frente a los individuos bajo su jurisdiccin.
En este sentido, la Corte Internacional de Justicia se pronunci respecto de la Convencin
para la Prevencin y Represin del Delito de Genocidio en el siguiente sentido: En tal convencin
los Estados contratantes no tienen intereses propios, tienen solamente, todos y cada uno de ellos,
un inters comn, que es el de preservar los fines superiores que son la razn de ser de la
convencin. En consecuencia, en una convencin de este tipo no puede hablarse de ventajas o
desventajas individuales de los estados, ni de mantener un equilibrio contractual exacto entre
derechos y deberes. La consideracin de los fines superiores de la Convencin es, en virtud de la
voluntad comn de las partes, el fundamento y la medida de todas las disposiciones. CIJ,
Reservas a la Convencin sobre el Genocidio, Opinin Consultiva, Recueil 1951, p. 23.
27
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
de otros tratados internacionales, como pueden ser aqullos en
materia de libre comercio o de doble tributacin. No obstante, el
prrafo primero del artculo 1 constitucional parte del reconocimiento
de los derechos humanos previstos tanto en la Constitucin como en
tratados internacionales de los cuales el Estado mexicano sea parte,
sin hacer referencia a la materia u objeto de los instrumentos
internacionales respectivos.
Lo anterior implica que inclusive pueden ser incorporados al
catlogo de derechos humanos previstos en la Constitucin aqullos
previstos en tratados internacionales que no sean considerados de
derechos humanos, tal y como ocurre con el ejemplo paradigmtico
del derecho a la notificacin, contacto y asistencia consular contenido
en la Convencin de Viena sobre Relaciones Consulares.20 En este
sentido, aunque dicho tratado internacional no constituya un tratado
de derechos humanos, ello no ha sido un obstculo para concluir que
el citado derecho efectivamente sea considerado un derecho humano.
As, hablar de tratados internacionales de derechos humanos
termina por dejar fuera a los derechos reconocidos en otro tipo de
instrumentos internacionales, a la vez que incluye otras normas
En trminos anlogos se pronunci la Corte Interamericana de Derechos Humanos al
sealar que los tratados modernos sobre derechos humanos, en general, y, en particular, la
Convencin Americana, no son tratados multilaterales de tipo tradicional, concluidos en funcin de
un intercambio recproco de derechos, para el beneficio mutuo de los Estados contratantes. Su
objeto y fin son la proteccin de los derechos fundamentales de los seres humanos,
independientemente de su nacionalidad, tanto frente a su propio Estado como frente a los otros
Estados contratantes. Al aprobar estos tratados sobre derechos humanos, los Estados se someten
a un orden legal dentro del cual ellos, por el bien comn, asumen varias obligaciones, no en
relacin con otros Estados, sino hacia los individuos bajo su jurisdiccin. Corte IDH, El Efecto de
las Reservas sobre la Entrada en Vigencia de la Convencin Americana sobre Derechos Humanos.
Opinin Consultiva OC-2/82 del 24 de septiembre de 1982, Serie A No. 2, prr. 29.
Finalmente, la Corte Europea de Derechos Humanos destac, en el caso Soering, que al
interpretar el Convenio Europeo de Derechos Humanos debe tenerse en cuenta su carcter
especfico de tratado que instrumenta una garanta colectiva para el respeto de los derechos
humanos y libertades fundamentales. CEDH, Caso Soering vs. Reino Unido, Demanda No.
14038/88, 7 de julio de 1989, prr. 87.
20
Suscrita por Mxico el siete de octubre de mil novecientos sesenta y tres y aprobada por
el Senado el veinticuatro de diciembre de mil novecientos setenta y cuatro, publicada originalmente
en el Diario Oficial de la Federacin, el veinte de febrero de mil novecientos setenta y cinco y, en
su ltima versin, el once de septiembre de mil novecientos sesenta y ocho.
28
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
previstas en dichos cuerpos normativos que no necesariamente se
encuentran relacionadas con derechos humanos, tal y como puede
ocurrir con las disposiciones relativas a la firma y ratificacin del
instrumento respectivo. Es por ello que este Tribunal Pleno interpreta
el contenido del artculo 1 constitucional en el sentido de que el
conjunto normativo previsto en dicho precepto se compone por
normas de derechos humanos, cuya fuente de reconocimiento puede
ser la Constitucin o un tratado internacional ratificado por Mxico con
independencia de la materia de ste.
Lo anterior da paso a una segunda cuestin. Antes de la reforma
constitucional, habra sido posible estudiar la dicotoma de tratados
internacionales de derechos humanos y tratados internacionales en
general a la luz del enfoque de jerarqua normativa construido a partir
de la interpretacin del artculo 133 constitucional. Sin embargo, no
puede soslayarse que la reforma al artculo 1 constitucional no se
acompa con una enmienda al artculo 133, lo cual conduce a este
Tribunal Pleno a concluir que la razn de dicha omisin atiende a lo
insatisfactorio que sera abordar con base en un criterio de jerarqua
formal la problemtica surgida por la existencia de dos fuentes
primigenias de reconocimiento de los derechos humanos.
Si se parte de la premisa de que ya exista un catlogo
constitucional de derechos humanos, lo relevante de la reforma
constitucional para efectos del presente estudio consiste en que
incorpora
los
derechos
humanos
reconocidos
en
tratados
internacionales a ese mismo catlogo. En este sentido, a partir de que
los tratados internacionales forman parte del ordenamiento jurdico
mexicano, resulta irrelevante la fuente u origen de un derecho
humano, ya sea la Constitucin o un instrumento internacional, toda
29
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
vez que el artculo 1 constitucional pone nfasis exclusivamente en su
integracin al catlogo constitucional.
De acuerdo con las consideraciones precedentes, la nueva
conformacin del catlogo de derechos humanos no puede ser
estudiada en trminos de jerarqua, pues la reforma constitucional
modific el artculo 1 precisamente para integrar un catlogo de
derechos y no para distinguir o jerarquizar esas normas en atencin a
la fuente de la que provienen. Esta conclusin se refuerza si se
considera que el artculo 1 constitucional, adems de determinar las
fuentes de reconocimiento de los derechos humanos, incorpora
criterios hermenuticos para la solucin de posibles antinomias frente
a la posible duplicidad en la regulacin de un derecho humano.
Como se desarrollar posteriormente, este artculo reconoce un
conjunto normativo compuesto nicamente por derechos humanos
que escapa a la regulacin de la jerarqua de las fuentes prevista en el
artculo 133 constitucional y cuyas normas de aplicacin fueron
especficamente diseadas para la interpretacin y aplicacin de
derechos humanos.
Lo antes expuesto conduce a este Tribunal Pleno a apuntar,
como una conclusin preliminar, que los derechos humanos
reconocidos en los tratados internacionales y en la Constitucin no se
relacionan entre s en trminos jerrquicos. En consecuencia, el
enfoque tradicional de la jerarqua de los tratados internacionales no
constituye una herramienta satisfactoria para determinar el lugar que
ocupan en el ordenamiento mexicano los derechos humanos
reconocidos en dichos instrumentos normativos. En estos trminos, a
continuacin se desarrollarn las implicaciones que la reforma
constitucional ha significado para este nuevo conjunto normativo de
30
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
rango constitucional, reparando especficamente en la construccin del
principio de supremaca constitucional y en la forma en la que deben
relacionarse los derechos humanos reconocidos en ambas fuentes
normativas.
3. El principio de supremaca constitucional a la luz del nuevo
marco constitucional
La problemtica antes enunciada conduce a este Tribunal Pleno
a replantear el concepto de supremaca constitucional para dar cuenta
de su operatividad a la luz de las reformas constitucionales, y en
especial del nuevo artculo 1, con motivo del surgimiento de un nuevo
parmetro de control de regularidad constitucional, cuya construccin
ya ha sido adelantada por esta Suprema Corte de Justicia de la
Nacin en algunos pronunciamientos. Para el desarrollo de esta
reinterpretacin, esta Suprema Corte de Justicia de la Nacin: (A) har
un breve anlisis de la reforma constitucional antes mencionada para
explicar el sustento normativo del nuevo parmetro de control de
regularidad
constitucional;
(B)
destacar
las
principales
consideraciones derivadas del expediente varios 912/2010, como
precedentes ineludible sobre este tema; y (C) determinar los
alcances del principio de supremaca constitucional a la luz de las
consideraciones precedentes.
A. La reforma constitucional en materia de derechos humanos
Las reformas constitucionales publicadas en el Diario Oficial de
la Federacin el seis y el diez de junio de dos mil once significaron la
introduccin de un nuevo paradigma constitucional en Mxico. Este
cambio trascendental exige a todos los operadores jurdicos y en
especial a este Alto Tribunal un minucioso anlisis del nuevo texto
31
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
constitucional, para determinar sus alcances y reinterpretar aquellas
figuras e instituciones que resulten incompatibles o que puedan
obstaculizar la aplicacin y el desarrollo de este nuevo modelo.
Al respecto, es de gran importancia que las nuevas figuras
incorporadas en la Constitucin se estudien con un enfoque de
derechos humanos y con interpretaciones propias del nuevo
paradigma constitucional, buscando as el efecto til de la reforma, con
el afn de optimizar y potencializar las reformas constitucionales sin
perder de vista su objetivo principal: la tutela efectiva de los derechos
humanos de las personas.21
En este sentido, una de las principales aportaciones de la
reforma constitucional es la creacin de un conjunto de normas de
derechos humanos, cuya fuente puede ser, indistintamente, la
Constitucin o un tratado internacional. As, este conjunto integra el
nuevo parmetro de control de regularidad o validez de las normas del
ordenamiento jurdico mexicano. Para justificar esta afirmacin, a
continuacin se desarrollar una interpretacin literal de los primeros
tres prrafos del artculo 1 constitucional, la cual se complementar
con una interpretacin sistemtica22 del vigente texto constitucional y
con una interpretacin que atienda a esclarecer cul era la intencin y
21
Por el contrario, la aplicacin y estudio de las reformas constitucionales con base en
herramientas interpretativas y figuras propias del viejo paradigma constitucional podran tener el
efecto de hacer nugatoria la reforma.
22
Este Pleno ha considerado que en virtud de que cada uno de los preceptos contenidos
en la Constitucin forma parte de un sistema constitucional, al interpretarlos debe partirse por
reconocer, como principio general, que el sentido que se les atribuya debe ser congruente con lo
establecido en las diversas disposiciones constitucionales que integran ese sistema, lo que se
justifica por el hecho de que todos ellos se erigen en el parmetro de validez al tenor del cual se
desarrolla el orden jurdico nacional. Vase la tesis aislada de este Pleno de rubro:
INTERPRETACIN CONSTITUCIONAL. AL FIJAR EL ALCANCE DE UN DETERMINADO
PRECEPTO DE LA CONSTITUCIN POLTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS
DEBE ATENDERSE A LOS PRINCIPIOS ESTABLECIDOS EN ELLA, ARRIBANDO A UNA
CONCLUSIN CONGRUENTE Y SISTEMTICA [Novena poca; Registro: 175912; Instancia:
Pleno; Tesis Aislada; Fuente: Semanario Judicial de la Federacin y su Gaceta; Localizacin:
Tomo XXIII; Febrero de 2006; Materia(s): Constitucional; Tesis: P. XII/2006; Pg. 25].
32
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
finalidad del Poder Reformador al aprobar las citadas reformas. 23 En
aras de una mayor claridad expositiva, a continuacin se trascriben los
primeros tres prrafos del artculo 1 constitucional:
Artculo 1o. En los Estados Unidos Mexicanos todas las personas
gozarn de los derechos humanos reconocidos en esta Constitucin
y en los tratados internacionales de los que el Estado Mexicano sea
parte, as como de las garantas para su proteccin, cuyo ejercicio no
podr restringirse ni suspenderse, salvo en los casos y bajo las
condiciones que esta Constitucin establece.
Las normas relativas a los derechos humanos se interpretarn
de conformidad con esta Constitucin y con los tratados
internacionales de la materia favoreciendo en todo tiempo a las
personas la proteccin ms amplia.
Todas las autoridades, en el mbito de sus competencias,
tienen la obligacin de promover, respetar, proteger y garantizar los
derechos humanos de conformidad con los principios de
universalidad, interdependencia, indivisibilidad y progresividad. En
consecuencia, el Estado deber prevenir, investigar, sancionar y
reparar las violaciones a los derechos humanos, en los trminos que
establezca la ley.
Partiendo de la necesidad de colocar a la persona como el eje en
torno al cual se articula la reforma en materia de derechos humanos,
el primer prrafo del artculo 1 constitucional establece que todas las
personas gozarn de los derechos humanos reconocidos por la
Constitucin y los tratados internacionales de los que el Estado
mexicano sea parte. En este sentido, el reconocimiento de estos
derechos encuentra justificacin en los principios de autonoma,
23
Este Pleno ha determinado que el propio artculo 14 de la Constitucin Poltica de los
Estados Unidos Mexicanos autoriza, frente a la insuficiencia u oscuridad de la letra de la ley, utilizar
mecanismos de interpretacin jurdica. Al desentraar el sentido y alcance de un mandato
constitucional deben privilegiarse aquellos que permitan conocer los valores o instituciones que se
quisieron salvaguardar por el Constituyente o el Poder Revisor. As, el mtodo gentico-teleolgico
permite, al analizar la exposicin de motivos de determinada iniciativa de reforma constitucional,
los dictmenes de las Comisiones del Congreso de la Unin y el propio debate, descubrir las
causas que generaron determinada enmienda al Cdigo Poltico, as como la finalidad de su
inclusin, lo que constituye un mtodo que puede utilizarse al analizar un artculo de la
Constitucin, ya que en ella se cristalizan los ms altos principios y valores de la vida democrtica
y republicana reconocidos en nuestro sistema jurdico. Vase la tesis aislada de este Pleno de
rubro: INTERPRETACIN DE LA CONSTITUCIN. ANTE LA OSCURIDAD O INSUFICIENCIA
DE SU LETRA DEBE ACUDIRSE A LOS MECANISMOS QUE PERMITAN CONOCER LOS
VALORES O INSTITUCIONES QUE SE PRETENDIERON SALVAGUARDAR POR EL
CONSTITUYENTE O EL PODER REVISOR [Novena poca; Registro: 196537; Instancia: Pleno;
Tesis Aislada; Fuente: Semanario Judicial de la Federacin y su Gaceta; Localizacin: Tomo VII,
Abril de 1998; Materia(s): Constitucional; Tesis: P. XXVIII/98; Pg. 117].
33
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
inviolabilidad y dignidad de todas las personas.24 Por lo tanto, desde la
Constitucin se reconocen derechos humanos cuya finalidad ltima
consiste en posibilitar que todas las personas desarrollen su propio
plan de vida.
Asimismo, ese prrafo seala que las personas tambin gozan
de las garantas previstas en ambos ordenamientos, lo cual conlleva la
posibilidad
de
distinguir
entre
garantas
internas
externas,
dependiendo del origen de los mecanismos que se encuentren a
disposicin de las personas para exigir la tutela de sus derechos
humanos.
Por otra parte, el segundo prrafo contiene dos herramientas
interpretativas cuya aplicacin resulta obligatoria en la interpretacin
de las normas de derecho humanos. La primera establece que todas
las
normas
de
derechos
humanos
debern
interpretarse
de
conformidad con la Constitucin y con los tratados internacionales de
derechos humanos. Sin pretender agotar los alcances de lo que
tradicionalmente se ha entendido como interpretacin conforme,
basta decir que dicha herramienta obliga a los operadores jurdicos
que se enfrenten a la necesidad de interpretar una norma de derechos
humanos incluyendo las previstas en la propia Constitucin a
considerar en dicha interpretacin al catlogo de derechos humanos
que ahora reconoce el texto constitucional. Esta obligacin busca
reforzar el principio desarrollado en el primer prrafo, en el sentido de
que los derechos humanos, con independencia de su fuente
normativa, forman parte de un mismo catlogo o conjunto normativo.
La segunda herramienta interpretativa es la que la doctrina y la
jurisprudencia han identificado como el principio pro persona, el cual
24
Nino, Carlos Santiago, tica y derechos humanos. Un ensayo de fundamentacin, 2 ed.,
Buenos Aires, Astrea, 1989, pgs. 199-304.
34
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
obliga a que la interpretacin de los derechos humanos se desarrolle
favoreciendo en todo tiempo la proteccin ms amplia. Este principio
constituye un criterio hermenutico propio de la interpretacin de los
derechos humanos que busca, principalmente, resolver los casos de
duda que puedan enfrentar los operadores jurdicos frente a la
eventual multiplicidad de normas e interpretaciones disponibles de
las mismas que resulten aplicables respecto de un mismo derecho.
En este sentido, adoptando como premisa la inviabilidad de resolver
este tipo de situaciones con apoyo en los criterios tradicionales de
interpretacin y resolucin de antinomias, el Poder Reformador25
otorg rango constitucional al principio pro persona como elemento
armonizador y dinmico para la interpretacin y aplicacin de normas
de derechos humanos.
Finalmente, el tercer prrafo del artculo 1 constitucional
constituye el fundamento constitucional de los siguientes elementos:
(i) los principios objetivos de los derechos humanos: universalidad,
interdependencia, indivisibilidad y progresividad; (ii) las obligaciones
genricas de las autoridades estatales para la tutela de los derechos
humanos: respeto, proteccin, promocin y garanta; y (iii) las
obligaciones especficas que forman parte de la obligacin genrica de
garanta: prevenir, investigar, sancionar y reparar.
Si bien el anlisis de cada uno de los principios y obligaciones
previstos en dicho precepto excede la finalidad del presente estudio,
una correcta interpretacin del contenido y funcin del catlogo de
derechos humanos previsto en el artculo 1 constitucional comporta la
necesidad de destacar que el prrafo tercero de dicho numeral prev
25
Al respecto, vase la tesis aislada de rubro PODER REFORMADOR DE LA
CONSTITUCIN. EL PROCEDIMIENTO REFORMATORIO RELATIVO EMANADO DE ESTE
RGANO CON FACULTADES LIMITADAS, ES SUSCEPTIBLE DE CONTROL
CONSTITUCIONAL [Novena poca; Registro: 165713; Instancia: Pleno; Tesis Aislada; Fuente:
Semanario Judicial de la Federacin y su Gaceta; Localizacin: Tomo XXX, Diciembre de 2009;
Materia(s): Constitucional; Tesis: P. LXXV/2009, Pg. 14].
35
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
como principios objetivos rectores de los derechos humanos los de
interdependencia e indivisibilidad. Segn el principio constitucional de
interdependencia, los derechos humanos establecen relaciones
recprocas entre ellos, de modo que en la gran mayora de los casos la
satisfaccin de un derecho es lo que hace posible el disfrute de otros.
Por otra parte, el principio constitucional de indivisibilidad de los
derechos humanos parte de la integralidad de la persona y la
necesidad de satisfacer todos sus derechos, lo que excluye la
posibilidad de establecer jerarquas en abstracto entre los mismos.
De acuerdo con lo anterior, de la literalidad de los primeros tres
prrafos del artculo 1 constitucional se desprende lo siguiente: (i) los
derechos humanos reconocidos en la Constitucin y en los tratados de
los cuales Mxico sea parte integran un mismo conjunto o catlogo de
derechos; (ii) la existencia de dicho catlogo tiene por origen la
Constitucin misma; (iii) dicho catlogo debe utilizarse para la
interpretacin de cualquier norma relativa a los derechos humanos; y
(iv) las relaciones entre los derechos humanos que integran este
conjunto deben resolverse partiendo de la interdependencia y la
indivisibilidad de los derechos humanos lo que excluye la jerarqua
entre unos y otros, as como del principio pro persona, entendido
como
herramienta
armonizadora
dinmica
que
permite
la
funcionalidad del catlogo constitucional de derechos humanos.
Ahora bien, en virtud de que cada uno de los preceptos
contenidos
en
la
Constitucin
forma
parte
de
un
sistema
constitucional, al interpretarlos debe partirse de reconocer, como
principio general, que el sentido que se les atribuya debe ser
congruente
con
lo
establecido
en
las
diversas
disposiciones
36
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
constitucionales que integran ese sistema.26 En este sentido, este
Pleno considera que el texto del artculo 1 constitucional no puede ser
interpretado de forma aislada y sin considerar los dems artculos
constitucionales.
No
obstante,
es
pertinente
aclarar
que
la
interpretacin sistemtica que se realiza a continuacin nicamente
toma en consideracin las disposiciones constitucionales que guardan
relacin con la ampliacin del catlogo de derechos humanos
reconocidos en la Constitucin y con su inclusin dentro del mbito
material de proteccin del juicio de amparo.
Como
expresamente
se
estableci
en
el
artculo
constitucional, en Mxico todas las personas son titulares tanto de los
derechos humanos reconocidos en la Constitucin como de los
previstos en los tratados internacionales que sean ratificados por el
Estado mexicano, lo que significa que, con motivo de la reforma
constitucional, los derechos humanos reconocidos en tratados
internacionales
se
han
integrado
expresamente
nuestro
ordenamiento jurdico interno, para ampliar el catlogo constitucional
de derechos humanos, en el entendido de que, derivado de la parte
final del primer prrafo del propio artculo 1 constitucional, cuando en
la Constitucin haya una restriccin expresa al ejercicio de los
derechos humanos, se deber estar a lo que indica la norma
constitucional.
En forma paralela pero indudablemente vinculada, la reforma
constitucional de amparo ampli expresamente la procedencia del
juicio de amparo, para reconocerla en aquellos casos en los cuales se
26
Al respecto, vase la tesis de rubro la tesis aislada de este Pleno de rubro:
INTERPRETACIN CONSTITUCIONAL. AL FIJAR EL ALCANCE DE UN DETERMINADO
PRECEPTO DE LA CONSTITUCIN POLTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS
DEBE ATENDERSE A LOS PRINCIPIOS ESTABLECIDOS EN ELLA, ARRIBANDO A UNA
CONCLUSIN CONGRUENTE Y SISTEMTICA [Novena poca; Registro: 175912; Instancia:
Pleno; Tesis Aislada, Fuente: Semanario Judicial de la Federacin y su Gaceta, Localizacin:
Tomo XXIII, Febrero de 2006; Materia(s): Constitucional; Tesis: P. XII/2006; Pg. 25].
37
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
hubiesen violado derechos humanos establecidos en tratados
internacionales, con independencia de su reconocimiento en la
Constitucin. Lo anterior se desprende del texto de la actual redaccin
de la fraccin I del artculo 103 constitucional:
Artculo 103. Los Tribunales de la Federacin resolvern toda
controversia que se suscite:
I. Por normas generales, actos u omisiones de la autoridad que
violen los derechos humanos reconocidos y las garantas otorgadas
para su proteccin por esta Constitucin, as como por los tratados
internacionales de los que el Estado Mexicano sea parte;
[].
As, la literalidad de la propia disposicin tambin permite
concluir que el artculo 1 constitucional ampli el catlogo de
derechos humanos previsto materialmente en la Constitucin para
comprender tambin aqullos reconocidos en tratados internacionales
de los que el Estado mexicano sea parte. Al respecto, este Tribunal
Pleno considera que esas conclusiones preliminares se refuerzan si se
compara este primer sentido o alcance normativo del artculo 1
constitucional con el texto de otros artculos constitucionales,
especialmente los reformados en junio de dos mil once. Dentro de la
reforma
constitucional
introdujeron
dos
en
materia
modificaciones
de
derechos
adicionales
humanos
que
se
resultan
especialmente significativas para entender la conformacin del nuevo
parmetro de regularidad constitucional, a saber, las modificaciones a
los artculos 15 y 105, fraccin II, inciso g) de la Constitucin:
Artculo 15. No se autoriza la celebracin de tratados para la
extradicin de reos polticos, ni para la de aquellos delincuentes del
orden comn que hayan tenido en el pas donde cometieron el delito,
la condicin de esclavos; ni de convenios o tratados en virtud de los
que se alteren los derechos humanos reconocidos por esta
Constitucin y en los tratados internacionales de los que el
Estado Mexicano sea parte.
38
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Artculo 105. La Suprema Corte de Justicia de la Nacin conocer,
en los trminos que seale la ley reglamentaria, de los asuntos
siguientes:
[]
II. De las acciones de inconstitucionalidad que tengan por
objeto plantear la posible contradiccin entre una norma de carcter
general y esta Constitucin.
Las acciones de inconstitucionalidad podrn ejercitarse, dentro
de los treinta das naturales siguientes a la fecha de publicacin de la
norma, por:
[]
g) La Comisin Nacional de los Derechos Humanos, en contra
de leyes de carcter federal, estatal y del Distrito Federal, as como
de tratados internacionales celebrados por el Ejecutivo Federal y
aprobados por el Senado de la Repblica, que vulneren los derechos
humanos consagrados en esta Constitucin y en los tratados
internacionales de los que Mxico sea parte. Asimismo, los
organismos de proteccin de los derechos humanos equivalentes en
los estados de la Repblica, en contra de leyes expedidas por las
legislaturas locales y la Comisin de Derechos Humanos del Distrito
Federal, en contra de leyes emitidas por la Asamblea Legislativa del
Distrito Federal.
[]
Antes de la multicitada reforma, el artculo 15 constitucional
prohiba la celebracin de tratados internacionales que permitieran la
alteracin entendida como afectacin de los derechos humanos
establecidos en la Constitucin. A partir de la reforma constitucional,
tampoco se autoriza la celebracin de tratados internacionales que
alteren
los
derechos
humanos
reconocidos
en
tratados
internacionales.
Por otra parte, el artculo 105, fraccin II, inciso g) constitucional
reconoca legitimacin a la Comisin Nacional de los Derechos
Humanos para promover acciones de inconstitucionalidad en contra de
leyes y de tratados internacionales por la violacin a derechos
humanos consagrados en la Constitucin. El cambio que introdujo la
reforma constitucional consiste en ahora tambin se admite la
procedencia de este tipo de acciones en contra de leyes y tratados
39
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
que vulneren los derechos humanos reconocidos en tratados
internacionales.
En esta lnea, partiendo de la base de que las reformas
constitucionales no alteraron el rgimen constitucional de los tratados
internacionales en general con independencia de su materia, resulta
indefectible concluir que lo nico que se modific fue el rgimen
constitucional de las normas internacionales de derechos humanos,
las cuales se integraron al parmetro de control de regularidad cuya
fuente es la propia Constitucin. Slo as se puede explicar que tanto
el artculo 15 como el artculo 105, fraccin II, inciso g), permitan la
posibilidad de efectuar un control de la validez de tratados
internacionales adoptando como parmetro para dicho estudio a los
derechos humanos reconocidos en otros tratados internacionales.
En efecto, los dos artculos en comento permiten que la validez
de los tratados internacionales se determine por su conformidad o no
contravencin con ciertas normas que integran, en ese sentido, un
parmetro de control de su regularidad normativa. A partir de la
reforma constitucional, las normas jurdicas que integran dicho
parmetro de control son los derechos humanos reconocidos en la
Constitucin y en los tratados internacionales de los que Mxico sea
parte.
Esto implica que la validez material de un tratado internacional
pueda estudiarse adoptando como parmetro de control a los
derechos humanos reconocidos en otro tratado internacional. Por
consiguiente, resulta evidente que una interpretacin sistemtica de
los artculos reformados conduce a la ineludible conclusin de que
existen normas internacionales que, por reconocer derechos humanos,
adquieren
un
papel
rol
preponderante
dentro
de
nuestro
40
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
ordenamiento jurdico, al convertirse en parte integrante del parmetro
de control de regularidad conforme al cual se estudia la validez del
resto de las normas jurdicas que conforman el ordenamiento jurdico
mexicano. Slo as puede entenderse que la Constitucin permita el
control de la regularidad de tratados internacionales con base en
normas cuyo origen normativo son otros tratados internacionales.
Ahora bien, adicionalmente a la interpretacin gramatical y
sistemtica, este Pleno considera que si se analiza cul fue la
intencin y finalidad del Poder Reformador al aprobar la reforma en
comento tambin se llega a la conclusin de que las normas de
derechos humanos, con independencia de su fuente, constituyen un
parmetro de regularidad constitucional que sirve para dar coherencia
y unidad al ordenamiento jurdico en casos de antinomias o lagunas
normativas.
En esta lnea, de diversos dictmenes de las Comisiones de
ambas Cmaras del Congreso de la Unin que participaron en el
proceso de reforma, en tanto expresiones de la voluntad del Poder
Reformador
de
la
Constitucin,
se
puede
apreciar
que
las
modificaciones de seis y diez de junio de dos mil once tuvieron la
intencin de reconocer el carcter constitucional de todas las normas
de derechos humanos, sin importar que su fuente sea la propia
Constitucin o los tratados internacionales, a efecto de que los
operadores jurdicos las utilicen para interpretar el sistema normativo
mexicano, erigindose as como parmetro de control de regularidad
constitucional.
En
el
dictamen
de
las
Comisiones
Unidas
de
Puntos
Constitucionales y de Derechos Humanos de la Cmara de Diputados
del veintitrs de abril de dos mil nueve, se establece que el Poder
41
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Reformador buscaba aprovechar la oportunidad histrica para otorgar
a los derechos humanos un lugar preferente en la Constitucin, de
manera que no existiese distincin entre los derechos humanos
reconocidos en la Constitucin y los derechos reconocidos por el
Estado mexicano va los tratados internacionales.27
Por su parte, en el dictamen del siete de abril de dos mil diez de
las Comisiones Unidas de Puntos Constitucionales y de Estudios
Legislativos del Senado de la Repblica, con opinin de la Comisin
Especial de Reforma del Estado, sostuvieron que emitan dictamen
favorable para que se apruebe la reforma a los artculos 1, 3, 15, 18,
29, 33, 89, 97, 102 y 105 de la Constitucin Poltica de los Estados
Unidos Mexicanos y se eleven a rango constitucional los derechos
humanos con lo que se ampla su reconocimiento y proteccin en
nuestro pas28 (nfasis aadido).
En este orden de ideas, en dicho documento se afirm que de
aprobarse la enmienda se establecera un amplio reconocimiento a los
derechos humanos dndoles carcter constitucional a todos, con lo
que deben considerarse incluidos, tanto los que se encuentran
expresamente reconocidos en el texto constitucional, como los
consagrados en los tratados internacionales de los que Mxico sea
parte (nfasis aadido). As, dentro de las consideraciones del
dictamen para llegar a esa conclusin, encontramos que se afirm que
el cambio de denominacin del Captulo I del Ttulo Primero de la
Constitucin resultaba plausible atendiendo a que se incorporan y
elevan a rango constitucional los derechos humanos (nfasis
aadido).
27
28
Gaceta Parlamentaria, Ao XII, nmero 2743-XVI, 23 de abril de 2009.
Gaceta del Senado, nmeros 19 y 20, 7 y 8 de abril de 2009.
42
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Una vez establecido por el Poder Reformador que no existe
distincin entre los derechos humanos en atencin a su fuente, ste
tambin reconoci que los derechos humanos en su conjunto
constituyen un parmetro de control de regularidad constitucional. En
este sentido, por ejemplo, en el dictamen del quince de diciembre de
dos mil diez de las Comisiones Unidas de Puntos Constitucionales y
de Derechos Humanos de la Cmara de Diputados, se sostiene que
al momento de interpretar las normas relativas a los derechos
humanos, no solamente ser la Constitucin su nico referente, sino
que adems, deber acudirse a lo establecido en los tratados
internacionales.29 De esta forma, como se afirma en el dictamen del
veintitrs de marzo de dos mil once de dichas Comisiones de la
Cmara de Diputados, cualquier persona puede hacer exigible y
justiciable de manera directa todo el catlogo de derechos hasta ahora
reconocidos.30
Como se afirma tambin en el dictamen del ocho de marzo de
dos mil once de las Comisiones Unidas de Puntos Constitucionales y
de Estudios Legislativos del Senado de la Repblica, con opinin de la
Comisin Especial de Reforma del Estado, no slo los derechos
humanos contenidos en tratados internacionales de derechos
humanos constituyen ese parmetro de control de regularidad
constitucional, sino todos aquellos derechos humanos contenidos en
los tratados internacionales, toda vez que puede darse el caso de que
se reconozca y garantice algn derecho fundamental en instrumentos
internacionales que no estn referidos especficamente a normar
derechos humanos, con lo cual la proteccin de los derechos [] se
ampliara.31
29
Gaceta Parlamentaria, Ao XIV, nmero 3162-IV, 15 de diciembre de 2010.
Gaceta del Senado, nmero 3226-VII, 23 de marzo de 2011.
31
Gaceta del Senado, nmero. 223, 8 de marzo de 2011.
30
43
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Por otro lado, del procedimiento legislativo que concluy con la
reforma constitucional al juicio de amparo del seis de julio de dos mil
once, tambin se desprende la conclusin de que los derechos
humanos contenidos en tratados internacionales obligan a todas las
autoridades dentro del sistema jurdico mexicano, por lo que
constituyen, junto con los derechos humanos constitucionales,
parmetros de control de regularidad constitucional, los cuales son
justiciables a travs del amparo independientemente de que su fuente
sea un tratado internacional.
En efecto, en el dictamen del diez de diciembre de dos mil nueve
de las Comisiones Unidas de Puntos Constitucionales y Estudios
Legislativos de la Cmara de Senadores se estableci que a pesar de
que existe una norma constitucional que avala la justiciabilidad de los
derechos conferidos por los tratados internacionales suscritos por
nuestro pas, resulta de la mayor importancia dejar claro en nuestra
Ley Fundamental que en materia de derechos humanos existen los
mecanismos para hacer valer una violacin al texto de dichos
instrumentos internacionales. Por ello, dada la necesidad de
constituir al juicio de amparo en un medio ms eficiente de control de
las actuaciones de las autoridades, [se pretende] ampliar el marco de
proteccin de ese proceso extendiendo la materia de control.32
En ese mismo dictamen se concluy que uno de los cambios
ms importantes que se proponen en la iniciativa guarda relacin con
el objeto de proteccin del juicio de amparo, el cual en sus orgenes
estaba limitado a las garantas individuales y que hoy pretenden
ampliar tambin a la proteccin de los derechos fundamentales
contenidas en instrumentos internacionales ratificados por el Estado
mexicano, de forma que habr una ampliacin de los contenidos
32
Gaceta del Senado, nmero 68, 10 de diciembre de 2009.
44
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
normativos a los cuales debern sujetarse y estar subordinadas las
autoridades pblicas.33 En el mismo sentido, la Comisin de Puntos
Constitucionales de la Cmara de Diputados en su dictamen del siete
de diciembre de dos mil diez fue muy clara al concluir categricamente
que se incorporan los instrumentos internacionales de derechos
humanos como parmetro directo de proteccin del individuo.34
As, de un anlisis del procedimiento legislativo se desprenden
las siguientes conclusiones en relacin con la intencin y finalidad del
Constituyente al aprobar las reformas en comento: (i) se buscaba que
los derechos humanos, independientemente de que su fuente sea la
Constitucin o los tratados internacionales, conformaran un solo
catlogo de rango constitucional; (ii) se pretendi que el conjunto de
los derechos humanos vincule a los rganos jurisdiccionales a
interpretar no slo las propias normas sobre la materia, sino toda
norma o acto de autoridad dentro del ordenamiento jurdico mexicano,
erigindose como parmetro de control de regularidad constitucional; y
(iii) se sostuvo que no slo las normas contenidas en los tratados
internacionales de derechos humanos constituyen ese parmetro de
regularidad constitucional, sino toda norma de derechos humanos,
independientemente de que su fuente sea la Constitucin, un tratado
internacional de derechos humanos o un tratado internacional que
aunque no se repute de derecho humanos proteja algn derecho de
esta clase.
33
34
Gaceta del Senado, nmero 68, 10 de diciembre de 2009.
Gaceta Parlamentaria, nmero 3156-IX, Ao XIV, 7 de diciembre de 2010.
45
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
B. El expediente varios 912/2010
Al resolver el expediente varios 912/2010,35 este Tribunal Pleno
estableci que el artculo 1 constitucional debe leerse e interpretarse
de manera conjunta con lo que dispone el artculo 133 de la
Constitucin, de forma que los jueces prefieran los derechos
humanos
contenidos
en
la
Constitucin
en
los
Tratados
Internacionales, aun a pesar de las disposiciones en contrario
establecidas en cualquier norma inferior (prrafos 28 y 29).
Siguiendo esa misma lnea, en dicho precedente se sostuvo que
el parmetro de anlisis de este tipo de control [constitucional y
convencional] que debern ejercer todos los jueces del pas, se
integra por los siguientes parmetros: (i) los derechos humanos
contenidos en la Constitucin y en los tratados internacionales en los
que el Estado mexicano sea parte; (ii) la jurisprudencia del Poder
Judicial de la Federacin; (iii) los criterios vinculantes de la Corte
Interamericana de Derechos Humanos y los criterios orientadores de la
jurisprudencia y precedentes de dicho tribunal internacional (prrafo
21).
As, se concluy que los jueces nacionales deben inicialmente
observar los derechos humanos establecidos en la Constitucin
Mexicana y en los tratados internacionales de los que el Estado
mexicano sea parte, as como los criterios emitidos por el Poder
Judicial de la Federacin al interpretarlos y acudir a los criterios
interpretativos de la Corte Interamericana para evaluar si existe alguno
35
Resuelto por el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nacin mediante resolucin
de catorce de julio de dos mil once, bajo la ponencia de la Ministra Margarita Luna Ramos
(encargado del engrose: Ministro Jos Ramn Cosso Daz).
46
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
que resulte ms favorecedor y procure una proteccin ms amplia del
derecho que se pretende proteger (prrafo 31).
En este sentido, este precedente, posterior a la reforma de junio
de dos mil once, est en la lnea de la interpretacin gramatical,
sistemtica y originalista antes desarrollada.
C. Alcances del principio de supremaca constitucional
Como se ha venido sealando a lo largo de la presente
sentencia, las normas de derechos humanos constituyen el parmetro
de regularidad constitucional que deben atender todas las autoridades
del Estado mexicano, en el sentido de que los actos que emitan con
motivo de su funcin deben ser coherentes con el contenido de esas
normas.
As, la trascendencia del cambio de paradigma constitucional
antes descrito conlleva la necesidad de replantear parcialmente el
principio de supremaca constitucional, con base en los nuevos
enfoques introducidos por las reformas constitucionales de junio de
dos mil once. En efecto, tradicionalmente se ha entendido que el
principio de supremaca constitucional comporta el encumbramiento
de la Constitucin como norma fundamental del ordenamiento jurdico
mexicano, lo que a su vez implica, entre otras cosas, que el resto de
las normas jurdicas deben ser acordes a la misma, tanto en un
sentido formal como material.
Si bien este entendimiento no ha cambiado, lo que s ha
evolucionado a raz de las reformas constitucionales en comento es la
configuracin del conjunto de normas jurdicas respecto de las cuales
puede predicarse dicha supremaca dentro de nuestro ordenamiento
47
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
jurdico. Esta transformacin se explica por la ampliacin del catlogo
de derechos humanos previsto dentro de nuestra Constitucin, el cual
evidentemente puede calificarse como parte del conjunto normativo
que goza de esta supremaca constitucional. En este sentido, para
este Tribunal Pleno defender los derechos humanos es defender la
propia Constitucin.
Como se ha expuesto anteriormente, el catlogo de derechos
humanos comprende tanto los que se encuentran expresamente
reconocidos en la Constitucin como aqullos contemplados en los
tratados internacionales ratificados por el Estado mexicano. En este
orden de ideas, la supremaca constitucional se predica de todos los
derechos humanos incorporados al ordenamiento mexicano, en tanto
forman parte de un mismo catlogo o conjunto normativo. Esta
conclusin se refuerza con el mandato expreso del Poder Reformador
de permitir que los derechos humanos de fuente internacional puedan
ser empleados como parmetro de validez del resto de las normas
jurdicas del ordenamiento jurdico mexicano, dentro de las cuales se
incluyeron expresamente los propios instrumentos internacionales.
No obstante, la afirmacin antes expuesta exige dar respuesta a
la siguiente interrogante: cmo es posible que una norma, cuya
existencia y validez depende de la Constitucin, establezca junto con
normas constitucionales, el parmetro de control de la validez de todas
las dems normas del ordenamiento jurdico?
La respuesta a esta interrogante requiere la disociacin de dos
momentos: (i) la incorporacin de un tratado internacional al orden
jurdico que tiene lugar a partir del cumplimiento de los requisitos
formales de validez, los cuales se refieren fundamentalmente a la
celebracin del tratado internacional por el Presidente de la Repblica
48
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
y su ratificacin por el Senado; y (ii) una vez incorporado al sistema
jurdico, las satisfaccin de los requisitos materiales de validez, que
consisten bsicamente en la conformidad del tratado con la
Constitucin, en el sentido general de que el contenido del instrumento
internacional
no
contrare
las
normas
constitucionales
especficamente que no afecte los derechos humanos previstos en la
propia Constitucin y en otros tratados internacionales.
Estos dos momentos pueden reconducirse a la distincin entre
dos dimensiones de la regularidad normativa propias de todo Estado
constitucional: por un lado, lo que sera la vigencia o existencia de
las normas, que hace referencia a la forma de los actos normativos y
que es una propiedad que depende de la correspondencia con las
normas formales sobre su produccin; y por otro lado, la validez
material o validez propiamente dicha que depende de la coherencia
con las normas sustanciales sobre su produccin.36
En esta lnea, los requisitos de existencia o vigencia de los
tratados internacionales estn contemplados en los artculos 89,37 7638
y 133 constitucionales. Como ya se seal, estos preceptos
establecen que los tratados internacionales deben ser firmados por el
36
15-36.
Ferrajoli, Luigi, Derechos y garantas. La ley del ms dbil, Madrid, Trotta, 1999, pgs.
37
Artculo 89. Las facultades y obligaciones del Presidente, son las siguientes:
[]
X. Dirigir la poltica exterior y celebrar tratados internacionales, as como terminar,
denunciar, suspender, modificar, enmendar, retirar reservas y formular declaraciones
interpretativas sobre los mismos, sometindolos a la aprobacin del Senado. En la conduccin de
tal poltica, el titular del Poder Ejecutivo observar los siguientes principios normativos: la
autodeterminacin de los pueblos; la no intervencin; la solucin pacfica de controversias; la
proscripcin de la amenaza o el uso de la fuerza en las relaciones internacionales; la igualdad
jurdica de los Estados; la cooperacin internacional para el desarrollo; el respeto, la proteccin y
promocin de los derechos humanos y la lucha por la paz y la seguridad internacionales;
[].
38
Artculo 76. Son facultades exclusivas del Senado:
I. [].
Adems, aprobar los tratados internacionales y convenciones diplomticas que el Ejecutivo
Federal suscriba, as como su decisin de terminar, denunciar, suspender, modificar, enmendar,
retirar reservas y formular declaraciones interpretativas sobre los mismos;
[].
49
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Presidente de la Repblica en su calidad de Jefe del Estado mexicano
y aprobados por el Senado. Por otra parte, los requisitos de validez
material se contemplan en los artculos 133 y 15 constitucionales.
Estos artculos exigen, respectivamente, que los contenidos de los
tratados internacionales estn de acuerdo con los contenidos en el
texto constitucional y que no alteren los derechos humanos previstos
en la propia Constitucin y en otros tratados internacionales. As,
mientras el incumplimiento de los requisitos de forma conducira a
concluir que un tratado internacional no es derecho vigente en Mxico,
la no satisfaccin de los requisitos materiales obligara a declarar su
invalidez.
Corresponde ahora determinar cules son estos requisitos
materiales de validez que deben cumplir los tratados internacionales
incorporados (o que se vayan a incorporar) al sistema jurdico
mexicano. Mientras el artculo 133 constitucional impone a todos los
tratados internacionales el requisito material de no contravenir o estar
de
acuerdo
con
las
normas
constitucionales,
el
artculo
15
constitucional contiene otro requisito de validez material de naturaleza
especial, cuyo cumplimiento se exige nicamente respecto a los
tratados
internacionales
que
contengan
normas
de
derechos
humanos. La especialidad de este requisito radica en que slo permite
autoriza la celebracin de tratados internacionales cuyo contenido
no menoscabe el catlogo constitucional de derechos humanos, que
comprende tanto a los de fuente constitucional como internacional,
prohibicin que coincide plenamente con el principio de progresividad
y su corolario de no regresividad de los derechos humanos,
reconocido en el tercer prrafo del artculo 1 constitucional.
En otras palabras, la conformidad de las normas internacionales
de derechos humanos con la Constitucin para efectos de su
50
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
incorporacin al ordenamiento jurdico interno se debe analizar bajo la
regla especial del artculo 15 constitucional, entendida con los
principios pro persona, de interpretacin conforme y progresividad
previstos en el artculo 1 constitucional, los cuales permiten el
reconocimiento de nuevos derechos humanos, siempre y cuando esto
no se traduzca en un detrimento al contenido y alcance de los
derechos previamente reconocidos e integrantes del parmetro de
control de regularidad constitucional.
De acuerdo con lo anterior, puede decirse que el requisito
previsto en el artculo 133 constitucional refuerza la interpretacin de
que los tratados internacionales se encuentran en una posicin
jerrquica inferior a la Constitucin, mientras que el requisito previsto
en el artculo 15 constitucional garantiza que, con independencia de la
jerarqua normativa del instrumento que las reconozca, las normas
internacionales de derechos humanos, y no el tratado en su conjunto,
se integren al parmetro de regularidad contenido en el artculo 1
constitucional. As, las normas internacionales de derechos humanos
que cumplan con el requisito material previsto en el artculo 15,
pasarn a formar parte del catlogo constitucional de derechos
humanos, desvinculndose del tratado internacional que es su fuente
y, por lo tanto, de su jerarqua normativa, para gozar, en
consecuencia,
de
supremaca
constitucional
en
los
trminos
previamente definidos.
Ahora bien, todas las consideraciones antes apuntadas permiten
concluir a este Tribunal Pleno que las normas de derechos humanos
contenidas en tratados internacionales y en la Constitucin no se
relacionan entre s en trminos jerrquicos. En efecto, una vez que un
tratado es incorporado al orden jurdico, las normas de derechos
humanos que ste contenga se integran al catlogo de derechos que
51
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
funciona como un parmetro de regularidad constitucional, de tal
suerte que dichas normas no pueden contravenir el principio de
supremaca constitucional precisamente porque forman parte del
conjunto normativo respecto del cual se predica la supremaca.
En esta lnea, en caso de que tanto normas constitucionales
como normas internacionales se refieran a un mismo derecho, stas
se articularn de manera que se prefieran aqullas cuyo contenido
proteja de manera ms favorable a su titular atendiendo para ello al
principio pro persona. Por otro lado, ante el escenario de que un
derecho humano contenido en un tratado internacional del que Mxico
sea parte no est previsto en una norma constitucional, la propia
Constitucin en su artculo 1 contempla la posibilidad de que su
contenido se incorpore al conjunto de derechos que gozarn todas las
personas y que tendrn que respetar y garantizar todas las
autoridades y, conforme a los cuales, debern interpretarse los actos
jurdicos tanto de autoridades como de particulares a efecto de que
sean armnicos y coherentes con dichos contenidos fundamentales.
Si bien todos los tratados internacionales deben ajustarse a los
procedimientos de incorporacin previstos en el ordenamiento jurdico
a efecto de determinar su existencia, en el caso de que contengan
normas de derechos humanos stas pasan a formar parte del
parmetro de control de la regularidad constitucional al que este Pleno
se ha referido a lo largo de esta sentencia.
Recapitulando lo dicho hasta ahora, es importante reiterar que
las relaciones entre los derechos humanos que integran el nuevo
parmetro de control de regularidad deben desarrollarse en forma
armnica, sin introducir criterios de jerarqua entre las mismas. Este
criterio se refuerza con la interpretacin literal, sistemtica y
52
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
originalista de las reformas constitucionales de seis y diez de junio de
dos mil once, las cuales fueron contundentes en cuanto a la necesidad
de comprender a las normas que integran el catlogo de derechos
humanos como un conjunto homogneo que opera como un
parmetro de regularidad del resto de las normas y actos jurdicos.
Ahora bien, como ya se seal, derivado de la parte final del
primer prrafo del artculo 1 constitucional, el Pleno de esta Suprema
Corte de Justicia de la Nacin entiende que cuando en la Constitucin
haya una restriccin expresa al ejercicio de los derechos humanos, se
deber estar a lo que indica la norma constitucional.
Finalmente, como se desprende de la resolucin del expediente
varios 912/2010 y de las sentencias que han desarrollado los criterios
derivados de dicho asunto, este Alto Tribunal ha sido consistente en
reconocer la posibilidad de que las autoridades jurisdiccionales
realicen un control de regularidad, ya sea concentrado o difuso
dependiendo de las atribuciones de cada rgano y de la va en la que
se tramite el asunto, para lo cual pueden emplear parmetros de
constitucionalidad o de convencionalidad.
Al respecto, es importante recordar que, como ha sido
exhaustivamente expuesto, las fuentes normativas que dan lugar a los
dos parmetros de control son las normas de derechos humanos
previstas en la Constitucin y en los tratados internacionales de los
cuales el Estado mexicano es parte. Consecuentemente, ambos
parmetros de control forman parte del mismo conjunto normativo y,
por tanto, integran el aludido parmetro de control de regularidad, de
modo que hablar de constitucionalidad o convencionalidad implica
hacer referencia al mismo parmetro de regularidad o validez, aunque
para efectos meramente didcticos pueda diferenciarse entre el origen
53
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
de la norma empleada para desarrollar el estudio de validez
respectivo.
Por lo dems, la Corte Interamericana de Derechos Humanos se
ha pronunciado en sentido similar, al establecer que la pretensin de
oponer el deber de los tribunales internos de realizar el control de
constitucionalidad al control de convencionalidad que ejerce la Corte,
es en realidad un falso dilema, pues una vez que el Estado ha
ratificado el tratado internacional y reconocido la competencia de sus
rganos de control, precisamente a travs de sus mecanismos
constitucionales, aqullos pasan a conformar su ordenamiento jurdico.
De tal manera, el control de constitucionalidad implica necesariamente
un control de convencionalidad, ejercidos de forma complementaria39
(nfasis aadido).
II. El valor de la jurisprudencia emitida por la Corte Interamericana
de Derechos Humanos
El segundo punto de contradiccin suscitado por los criterios
emitidos por los Tribunales Colegiados consiste en determinar si los
criterios interpretativos contenidos en la jurisprudencia de la Corte
Interamericana de Derechos Humanos son orientadores u obligatorios
para los jueces nacionales. Al respecto, es pertinente destacar que
con motivo de la resolucin dictada en el expediente varios 912/2010,
esta Suprema Corte de Justicia de la Nacin emiti la tesis aislada P.
LXV/2011 (9a.), cuyo rubro es SENTENCIAS EMITIDAS POR LA
CORTE INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS. SON
VINCULANTES EN SUS TRMINOS CUANDO EL ESTADO
39
Corte IDH. Caso Gelman Vs. Uruguay. Supervisin de Cumplimiento de Sentencia.
Resolucin de la Corte Interamericana de Derechos Humanos de 20 de marzo de 2013, prrs. 69 a
72, 87 y 88.
54
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
MEXICANO FUE PARTE EN EL LITIGIO.40 En dicho criterio se
determin que las sentencias emitidas por la Corte Interamericana de
Derechos Humanos son vinculantes para el Estado mexicano por ser
cosa juzgada, lo cual resulta igualmente aplicable a los criterios
interpretativos contenidos en las mismas. Asimismo, se agreg lo
siguiente:
[E]sta Suprema Corte no es competente para analizar, revisar,
calificar o decidir si una sentencia dictada por la Corte Interamericana
de Derechos Humanos, esto es, en sede internacional, es correcta o
incorrecta, o si la misma se excede en relacin a las normas que
rigen su materia y proceso. Esta sede de jurisdiccin nacional no
puede hacer ningn pronunciamiento que cuestione la validez de lo
resuelto por la Corte Interamericana de Derechos Humanos, ya que
para el Estado mexicano dichas sentencias constituyen, como ya
dijimos, cosa juzgada y, por ende, lo nico procedente es acatar y
reconocer la totalidad de la sentencia en sus trminos. (prrafo17).
En la misma lnea, el Tribunal Pleno emiti un criterio en el que
refrend la vinculatoriedad de las sentencias emitidas por la Corte
Interamericana en casos en los que el Estado mexicano haya sido
parte.41
Antes de iniciar con el desarrollo de estas nuevas reflexiones, es
importante distinguir entre la obligatoriedad de la jurisprudencia del
Poder Judicial de la Federacin de la vinculatoriedad de los
precedentes de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
De acuerdo con la Constitucin y la Ley de Amparo, la
jurisprudencia del Poder Judicial de la Federacin es obligatoria
40
Dcima poca; Registro: 160482; Instancia: Pleno; Tesis Aislada; Fuente: Semanario
Judicial de la Federacin y su Gaceta; Localizacin: Libro III, Diciembre de 2011, Tomo 1;
Materia(s): Constitucional; Tesis: P. LXV/2011 (9a.); Pg. 556.
41
SENTENCIAS EMITIDAS POR LA CORTE INTERAMERICANA DE DERECHOS
HUMANOS EN ASUNTOS DONDE EL ESTADO MEXICANO FUE PARTE. PARA QUE SUS
CRITERIOS TENGAN CARCTER VINCULANTE NO REQUIEREN SER REITERADOS.
[Dcima poca; Registro: 2003156; Instancia: Pleno; Tesis Aislada; Fuente: Semanario Judicial de
la Federacin y su Gaceta; Localizacin: Libro XVIII, Marzo de 2013, Tomo 1; Materia(s):
Constitucional; Tesis: P. III/2013 (10a.); Pg. 368].
55
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
cuando cumple con los requisitos de integracin previstos en dichos
ordenamientos: reiteracin, contradiccin o sustitucin.42 En este
sentido, dicha obligatoriedad no se predica respecto de los criterios
identificados como tesis aisladas, cuya aplicacin no es obligatoria
por no haber cumplido con los requisitos formales para ello.
A diferencia de lo anterior, la jurisprudencia interamericana se
integra en un sistema de precedentes,43 segn el cual todos los
criterios interpretativos contenidos en una resolucin dictada por la
Corte Interamericana con motivo de un asunto de naturaleza
contenciosa gozan de fuerza vinculante, sin necesidad de que se siga
un
procedimiento
formal
distinto.
En
este
sentido,
cada
pronunciamiento del tribunal interamericano se integra a la doctrina
jurisprudencial
interamericana,
cuya
fuerza
vinculante
debe
entenderse en clave de progresividad, es decir, como un estndar
mnimo que debe ser recibido por los Estados que hayan reconocido la
competencia contenciosa de la Corte Interamericana para ser
aplicados directamente, en forma armnica con la jurisprudencia
nacional,
para
ser
desarrollados
ampliados
mediante
jurisprudencia que resulte ms favorecedora para las personas.
Ahora bien, como resultado de nuevas reflexiones y con motivo
de la nueva integracin de este Tribunal Pleno, debe considerarse que
esta fuerza vinculante de los criterios interpretativos contenidos en
sentencias interamericanas debe extenderse a aqullas dictadas en
42
En este sentido, el artculo 215 de la Ley de Amparo establece que [l]a jurisprudencia se
establece por reiteracin de criterios, por contradiccin de tesis y por sustitucin. Por otra parte, el
artculo 94 constitucional establece que la ley fijar los trminos en que sea obligatoria la
jurisprudencia que establezcan los Tribunales del Poder Judicial de la Federacin y los Plenos de
Circuito sobre la interpretacin de la Constitucin y normas generales, as como los requisitos para
su interrupcin y sustitucin. Finalmente, las fracciones II y XIII del artculo 107 constitucional
hacen referencia a la formacin de jurisprudencia por reiteracin y contradiccin.
43
Cabe sealar que la propia Corte Interamericana denomina sus criterios interpretativos
de la Convencin Americana como jurisprudencia. Al respecto, vase por ejemplo: Corte IDH
Caso Radilla Pacheco Vs. Mxico. Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y Costas.
Sentencia de 23 de Noviembre de 2009. Serie C No. 209, prrs. 65, 67, 93, 110, 116, 139, 180,
274, 339, 340, 346, 347-a, 360, 371 y 374.
56
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
casos en los que el Estado mexicano no haya sido parte, segn se
expone a continuacin.
Por un lado, debe considerarse que la jurisprudencia de la Corte
Interamericana constituye una extensin de la Convencin Americana
sobre Derechos Humanos. Esta idea puede clarificarse si se parte de
la diferencia que puede trazarse desde el punto de vista conceptual
entre lo que es una disposicin y una norma.44 De acuerdo con esta
distincin,
la
disposicin
alude
al
texto
de
un
determinado
ordenamiento (un artculo, una fraccin, etctera), mientras que la
norma hace referencia al significado que se le atribuye a ese texto. En
este caso, la disposicin sera el texto de la Convencin Americana,
mientras que las normas seran los distintos significados que la Corte
Interamericana atribuye al texto convencional a travs de su
jurisprudencia, incluyendo aqullos dictados en los casos en los que el
Estado mexicano no haya sido parte.
Por otro lado, conforme al artculo 1 constitucional, todos los
derechos humanos reconocidos en la Constitucin y en los tratados
internacionales ratificados por el Estado mexicano forman parte de un
mismo catlogo que conforma el parmetro de control de regularidad
del ordenamiento jurdico mexicano. En consecuencia, los criterios que
emita la Corte Interamericana en sus resoluciones, como intrprete
ltimo de la Convencin Americana en el mbito internacional, son
vinculantes para todos los rganos jurisdiccionales del pas.
Adicionalmente, es permitente aclarar que tanto la Suprema
Corte de Justicia de la Nacin como el resto de las cortes supremas de
44
Se trata de una importante distincin bastante extendida tanto en la teora del derecho,
como en la dogmtica constitucional y la jurisprudencia constitucional comparada. Por todos, vase
Pozzolo, Susana, y Escudero, Rafael (eds.), Disposicin vs. Norma, Lima, Palestra, 2011; y Daz
Revorio, Francisco Javier, Las sentencias interpretativas del Tribunal Constitucional, Valladolid,
Lexnova, 2001, pgs. 35-37.
57
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
los Estados de las Amricas que han reconocido la competencia
contenciosa de la Corte Interamericana de Derechos Humanos deben
mantener un dilogo jurisprudencial constante con el tribunal
internacional, puesto que ambos tienen la misma finalidad: la
proteccin de los derechos humanos. Es en este sentido que las
relaciones entre esta Suprema Corte y la Corte Interamericana deben
entenderse en trminos de cooperacin y colaboracin.
En este orden de ideas, la jurisprudencia de la Corte
Interamericana
de
Derechos
Humanos,
aun
entendida
como
vinculante para los operadores jurdicos mexicanos, no pretende ni
puede sustituir a la jurisprudencia nacional ni debe ser aplicada en
forma acrtica. Por el contrario, la aplicacin de la jurisprudencia del
tribunal interamericano debe hacerse en clave de colaboracin y no de
contradiccin con la jurisprudencia nacional, de modo que los
pronunciamientos que eventualmente impliquen una diferencia de
criterio respecto a los alcances que pueda llegar a tener un derecho en
especfico debern ser resueltos, en trminos de lo apuntado en el
apartado anterior, con base en el principio pro persona.
En efecto, conforme al artculo 1 constitucional, cuando se
susciten conflictos respecto a cmo interpretar un derecho humano en
especfico, los operadores jurdicos debern atender, en cumplimiento
al principio pro persona, a las interpretaciones que resulten ms
amplias o menos restrictivas para los derechos de las personas. Esta
operacin podr concluir con el favorecimiento de un criterio del Poder
Judicial de la Federacin o de uno emitido por la Corte Interamericana
de Derechos Humanos, pero cualquiera que sea el criterio aplicado, el
resultado debe atender a la mejor proteccin de los derechos
humanos de las personas.
58
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Es en ese sentido que resulta evidente que la jurisprudencia
interamericana es vinculante para los jueces nacionales cuando
resulte ms favorable, como lo ordena el principio pro persona
contenido en el artculo 1 constitucional, toda vez que sta sienta las
bases para una interpretacin mnima respecto a un derecho en
particular.
As, no debe entenderse el carcter vinculante de los criterios
interamericanos en un sentido fuerte, es decir, como un lineamiento
que
constria
los
jueces
internos
resolver
aplicando
indefectiblemente el estndar sentado por la Corte Interamericana,
pasando por alto, incluso, los precedentes del Poder Judicial de la
Federacin. Por el contrario, esta obligatoriedad debe entenderse
como una vinculacin a los operadores jurdicos internos a observar
en sus resoluciones un estndar mnimo, que bien podra ser el
interamericano o el nacional, dependiendo cul sea el ms favorable a
las personas. En todo caso, lo importante ser que la inaplicacin de
un criterio jurisprudencial, nacional o interamericano, se justifique
atendiendo a la aplicacin de otro que resulte ms favorecedor a la
persona.
Aqu resulta de la mayor importancia introducir una aclaracin.
La vinculacin a los precedentes de la Corte Interamericana emitidos
en casos en los que el Estado mexicano ha sido parte no
necesariamente es igual a la emitida en aqullos donde no lo ha sido.
La razn de esto es evidente: cuando la Corte Interamericana de
Derechos
Humanos
dicta
una
sentencia,
aunque
aplica
su
jurisprudencia histrica para determinar el contenido de derechos
humanos que se encuentran previstos en un mismo instrumento
internacional obligatorio para todos los Estados parte del mismo, lo
hace analizando conductas especficas observadas por agentes
59
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
estatales de un Estado, en razn de un contexto fctico especfico y
atendiendo a las particularidades del ordenamiento jurdico respectivo.
As las cosas, cuando se trate de la aplicacin de un criterio
emitido por la Corte Interamericana de Derechos Humanos en un caso
en el que el Estado mexicano no ha sido parte, los operadores
jurdicos se encuentran obligados a analizar si el precedente resulta
aplicable al ordenamiento jurdico mexicano. Este paso previo no
depender de que la conducta ordenada como debida por la Corte
Interamericana sea compatible con la conducta, acto jurdico o norma
analizada, sino con el hecho de que el marco normativo analizado, el
contexto fctico y las particularidades del caso sean anlogas y, por
tanto, idneas para la aplicacin del precedente interamericano. Lo
mismo ocurre a nivel interno cuando un criterio jurisprudencial emitido,
por ejemplo, con base en la legislacin de un Estado se utiliza para
resolver un caso nacido al amparo de una legislacin similar de otro
estado. En estos casos, el operador jurdico deber analizar si las
razones que motivaron el pronunciamiento son las mismas, para
entonces poder determinar si el criterio jurisprudencial interamericano
es aplicable.
La conclusin antes expuesta se refuerza si tomamos en
consideracin que la jurisprudencia de la Corte Interamericana de
Derechos Humanos se ha ido construyendo como una especie de
lnea
evolutiva
formada
por
sentencias
que
se
encuentran
interconectadas. As, la determinacin del contenido de los derechos
humanos reconocidos en la Convencin Americana sobre Derechos
Humanos ha tenido como base la construccin de estndares que
resultan aplicables en todos los Estados de las Amricas.
60
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Es importante destacar que las consideraciones antes expuestas
se
ven
reforzadas
por
la
concepcin
que
la
propia
Corte
Interamericana de Derechos Humanos tiene respecto del control de
convencionalidad y la manera en la que su jurisprudencia vincula a los
rganos jurisdiccionales internos de los Estados. Al respecto, vale la
pena citar in extenso un pronunciamiento reciente de dicho tribunal
internacional:
67. De tal manera, es posible observar dos manifestaciones distintas
de esa obligacin de los Estados de ejercer el control de
convencionalidad, dependiendo de si la Sentencia ha sido dictada en
un caso en el cual el Estado ha sido parte o no. Lo anterior debido a
que a que la norma convencional interpretada y aplicada adquiere
distinta vinculacin dependiendo si el Estado fue parte material o
no en el proceso internacional.
68. En relacin con la primera manifestacin, cuando existe una
sentencia internacional dictada con carcter de cosa juzgada respecto
de un Estado que ha sido parte en el caso sometido a la jurisdiccin
de la Corte Interamericana, todos sus rganos, incluidos sus jueces y
rganos vinculados a la administracin de justicia, tambin estn
sometidos al tratado y a la sentencia de este Tribunal, lo cual les
obliga a velar para que los efectos de las disposiciones de la
Convencin y, consecuentemente, las decisiones de la Corte
Interamericana, no se vean mermados por la aplicacin de normas
contrarias a su objeto y fin o por decisiones judiciales o
administrativas que hagan ilusorio el cumplimiento total o parcial de la
sentencia. Es decir, en este supuesto, se est en presencia de cosa
juzgada internacional, en razn de lo cual el Estado est obligado a
cumplir y aplicar la sentencia. En esta situacin se encuentra el
Estado de Uruguay respecto de la Sentencia dictada en el caso
Gelman. Por ello, precisamente porque el control de convencionalidad
es una institucin que sirve como instrumento para aplicar el Derecho
Internacional, en el presente caso que existe cosa juzgada se trata
simplemente de emplearlo para dar cumplimiento en su integridad y
de buena fe a lo ordenado en la Sentencia dictada por la Corte en el
caso concreto, por lo que sera incongruente utilizar esa herramienta
como justificacin para dejar de cumplir con la misma, de conformidad
con lo sealado anteriormente (supra considerandos. 60 a 65).
69. Respecto de la segunda manifestacin del control de
convencionalidad, en situaciones y casos en que el Estado
concernido no ha sido parte en el proceso internacional en que fue
establecida determinada jurisprudencia, por el solo hecho de ser
Parte en la Convencin Americana, todas sus autoridades pblicas y
61
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
todos sus rganos, incluidas las instancias democrticas45, jueces y
dems rganos vinculados a la administracin de justicia en todos los
niveles, estn obligados por el tratado, por lo cual deben ejercer, en el
marco de sus respectivas competencias y de las regulaciones
procesales correspondientes, un control de convencionalidad tanto en
la emisin y aplicacin de normas, en cuanto a su validez y
compatibilidad con la Convencin, como en la determinacin,
juzgamiento y resolucin de situaciones particulares y casos
concretos, teniendo en cuenta el propio tratado y, segn
corresponda, los precedentes o lineamientos jurisprudenciales
de la Corte Interamericana.
70. La Corte estima pertinente precisar que la concepcin del
llamado control de convencionalidad tiene ntima relacin con el
principio de complementariedad, en virtud del cual la
responsabilidad estatal bajo la Convencin slo puede ser exigida a
nivel internacional despus de que el Estado haya tenido la
oportunidad de declarar la violacin y reparar el dao ocasionado por
sus propios medios. Este principio de complementariedad (tambin
llamado de subsidiariedad) informa transversalmente el Sistema
Interamericano de Derechos Humanos, el cual es, tal como lo
expresa el Prembulo de la misma Convencin Americana,
coadyuvante o complementario de la [proteccin] que ofrece el
derecho interno de los Estados americanos. De tal manera, el
Estado es el principal garante de los derechos humanos de la
personas, de manera que, si se produce un acto violatorio de dichos
derechos, es el propio Estado quien tiene el deber de resolver el
asunto a nivel interno y, [en su caso,] reparar, antes de tener que
responder ante instancias internacionales como el Sistema
Interamericano, lo cual deriva del carcter subsidiario que reviste el
proceso internacional frente a los sistemas nacionales de garantas
de los derechos humanos.
71. Lo anterior significa que, como consecuencia de la eficacia
jurdica de la Convencin Americana en todos los Estados Parte en la
misma, se ha generado un control dinmico y complementario de las
45
Al respecto, la Corte Interamericana seal en el caso Gelman lo siguiente: La
legitimacin democrtica de determinados hechos o actos en una sociedad est limitada por las
normas y obligaciones internacionales de proteccin de los derechos humanos reconocidos en
tratados como la Convencin Americana, de modo que la existencia de un verdadero rgimen
democrtico est determinada por sus caractersticas tanto formales como sustanciales, por lo que,
particularmente en casos de graves violaciones a las normas del Derecho Internacional de los
Derechos, la proteccin de los derechos humanos constituye un lmite infranqueable a la regla de
mayoras, es decir, a la esfera de lo susceptible de ser decidido por parte de las mayoras en
instancias democrticas, en las cuales tambin debe primar un control de convencionalidad, que es
funcin y tarea de cualquier autoridad pblica y no slo del Poder Judicial. En este sentido, la
Suprema Corte de Justicia ha ejercido, en el Caso Nibia Sabalsagaray Curutchet, un adecuado
control de convencionalidad respecto de la Ley de Caducidad, al establecer, inter alia, que el lmite
de la decisin de la mayora reside, esencialmente, en dos cosas: la tutela de los derechos
fundamentales (los primeros, entre todos, son el derecho a la vida y a la libertad personal, y no hay
voluntad de la mayora, ni inters general ni bien comn o pblico en aras de los cuales puedan ser
sacrificados) y la sujecin de los poderes pblicos a la ley. Otros tribunales nacionales se han ido
tambin a los lmites de la democracia en relacin con la proteccin de derechos fundamentales.
Corte IDEH, Caso Gelman Vs. Uruguay, Fondo y Reparaciones, Sentencia de 24 de febrero de
2011, Serie C. No. 221, prr.239.
62
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
obligaciones convencionales de los Estados de respetar y garantizar
derechos humanos, conjuntamente entre las autoridades internas y
las instancias internacionales (en forma complementaria), de
modo que los criterios de decisin puedan ser conformados y
adecuados entre s. As, la jurisprudencia de la Corte muestra casos
en que se retoman decisiones de tribunales internos para
fundamentar y conceptualizar la violacin de la Convencin en el
caso especfico. [].
72. []. As adquiere sentido el mecanismo convencional, el
cual obliga a todos los jueces y rganos judiciales a prevenir
potenciales violaciones a derechos humanos, las cuales deben
solucionarse a nivel interno teniendo en cuenta las interpretaciones
de la Corte Interamericana y, solo en caso contrario, pueden ser
considerados por sta, en cuyo supuesto ejercer un control
complementario de convencionalidad. 46
Este
proceder
ha
sido
paradigmtico
en
el
quehacer
jurisprudencial interamericano, pues no debe olvidarse que las
sentencias de la Corte Interamericana, en trminos del propio tribunal
internacional, tienen un doble carcter, a saber, tutelar y preventivo.
As, la funcin tutelar de una sentencia se cumple por el hecho de que
sta pretende resolver un caso especfico con base en la
determinacin de medidas de reparacin a cargo del Estado
condenado, las cuales buscarn desaparecer los efectos de una
violacin a derechos humanos. Por otra parte, la funcin preventiva se
desprende los precedentes contenidos en las sentencias, los cuales,
adems de resolver un asunto especfico, pretenden sentar un
estndar mnimo que resulte aplicable para casos futuros y respecto
de otros Estados formalmente ajenos a la controversia que dio lugar a
la emisin de la sentencia.
Por todo lo anterior, se concluye que los criterios emanados de la
jurisprudencia emitida por la Corte Interamericana de Derechos
Humanos resultan vinculantes para los jueces nacionales con
independencia de que el Estado mexicano haya sido parte en el litigio,
46
Corte IDH. Caso Gelman Vs. Uruguay. Supervisin de Cumplimiento de Sentencia.
Resolucin de la Corte Interamericana de Derechos Humanos de 20 de marzo de 2013, prrs. 69 a
72, 87 y 88.
63
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
toda vez que dotan de contenido a los derechos humanos establecidos
en la Convencin Americana sobre Derechos Humanos. No obstante,
la aplicacin de dicha jurisprudencia deber hacerse en trminos de
colaboracin y no contradiccin con la jurisprudencia nacional,
atendiendo en todo momento al principio pro persona. En este sentido,
la fuerza vinculante de la jurisprudencia de la Corte Interamericana se
desprende del propio mandato constitucional establecido en el artculo
1 constitucional, pues el principio pro persona obliga a los jueces
nacionales a resolver atendiendo a la interpretacin ms favorable a la
persona.
Por consiguiente, este carcter vinculante de la jurisprudencia
interamericana exige a los operadores jurdicos mexicanos lo
siguiente: (i) cuando el criterio se haya emitido en un caso en el que el
Estado mexicano no haya sido parte, la aplicabilidad del precedente al
caso especfico debe determinarse con base en la verificacin de la
existencia de las mismas razones que motivaron el pronunciamiento;
(ii) en todos los casos en que sea posible, debe armonizarse la
jurisprudencia interamericana con la nacional; y (iii) de ser imposible la
armonizacin, debe aplicarse el criterio que resulte ms favorecedor
para la proteccin de los derechos humanos de las personas.
SEXTO. Criterios obligatorios. De acuerdo con lo anterior,
deben prevalecer con carcter de jurisprudencia los criterios
establecidos por este Tribunal Pleno de la Suprema Corte de Justicia
de la Nacin en los siguientes trminos:
DERECHOS HUMANOS CONTENIDOS EN LA CONSTITUCIN
Y EN LOS TRATADOS INTERNACIONALES. CONSTITUYEN
EL PARMETRO DE CONTROL DE REGULARIDAD
CONSTITUCIONAL, PERO CUANDO EN LA CONSTITUCIN
HAYA UNA RESTRICCIN EXPRESA AL EJERCICIO DE
AQULLOS, SE DEBE ESTAR A LO QUE ESTABLECE EL
64
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
TEXTO CONSTITUCIONAL. El primer prrafo del artculo 1
constitucional reconoce un conjunto de derechos humanos cuyas
fuentes son la Constitucin y los tratados internacionales de los
cuales el Estado Mexicano sea parte. De la interpretacin literal,
sistemtica y originalista del contenido de las reformas
constitucionales de seis y diez de junio de dos mil once, se
desprende que las normas de derechos humanos,
independientemente de su fuente, no se relacionan en trminos
jerrquicos, entendiendo que, derivado de la parte final del primer
prrafo del citado artculo 1, cuando en la Constitucin haya una
restriccin expresa al ejercicio de los derechos humanos, se
deber estar a lo que indica la norma constitucional, ya que el
principio que le brinda supremaca comporta el encumbramiento
de la Constitucin como norma fundamental del orden jurdico
mexicano, lo que a su vez implica que el resto de las normas
jurdicas deben ser acordes con la misma, tanto en un sentido
formal como material, circunstancia que no ha cambiado; lo que s
ha evolucionado a raz de las reformas constitucionales en
comento es la configuracin del conjunto de normas jurdicas
respecto de las cuales puede predicarse dicha supremaca en el
orden jurdico mexicano. Esta transformacin se explica por la
ampliacin del catlogo de derechos humanos previsto dentro de
la Constitucin Poltica de los Estados Unidos Mexicanos, el cual
evidentemente puede calificarse como parte del conjunto
normativo que goza de esta supremaca constitucional. En este
sentido, los derechos humanos, en su conjunto, constituyen el
parmetro de control de regularidad constitucional, conforme al
cual debe analizarse la validez de las normas y actos que forman
parte del orden jurdico mexicano.
JURISPRUDENCIA
EMITIDA
POR
LA
CORTE
INTERAMERICANA
DE
DERECHOS
HUMANOS.
ES
VINCULANTE PARA LOS JUECES MEXICANOS SIEMPRE
QUE SEA MS FAVORABLE A LA PERSONA. Los criterios
jurisprudenciales de la Corte Interamericana de Derechos
Humanos, con independencia de que el Estado Mexicano haya
sido parte en el litigio ante dicho tribunal, resultan vinculantes para
los jueces nacionales al constituir una extensin de la Convencin
Americana sobre Derechos Humanos, toda vez que en dichos
criterios se determina el contenido de los derechos humanos
establecidos en ese tratado. La fuerza vinculante de la
jurisprudencia interamericana se desprende del propio mandato
establecido en el artculo 1 constitucional, pues el principio pro
persona obliga a los jueces nacionales a resolver cada caso
atendiendo a la interpretacin ms favorable a la persona. En
cumplimiento de este mandato constitucional, los operadores
65
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
jurdicos deben atender a lo siguiente: (i) cuando el criterio se
haya emitido en un caso en el que el Estado Mexicano no haya
sido parte, la aplicabilidad del precedente al caso especfico debe
determinarse con base en la verificacin de la existencia de las
mismas razones que motivaron el pronunciamiento; (ii) en todos
los casos en que sea posible, debe armonizarse la jurisprudencia
interamericana con la nacional; y (iii) de ser imposible la
armonizacin, debe aplicarse el criterio que resulte ms
favorecedor para la proteccin de los derechos humanos.
Por lo expuesto y fundado se resuelve:
PRIMERO.
sustentadas
por
existe
el
Primer
contradiccin
Tribunal
de
tesis
Colegiado
en
entre
las
Materias
Administrativa y de Trabajo del Dcimo Primer Circuito y el Sptimo
Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito, en trminos del
considerando Cuarto de esta resolucin.
SEGUNDO. Deben prevalecer con carcter de jurisprudencia,
los criterios sustentados por este Tribunal Pleno de la Suprema Corte
de Justicia de la Nacin, en los trminos precisados en el ltimo
considerando de esta resolucin.
TERCERO. Dese publicidad a las tesis jurisprudenciales que se
sustentan en la presente resolucin, en trminos del artculo 195 de la
Ley de Amparo
Notifquese; remtanse las tesis jurisprudenciales que se
establecen a la Direccin General de la Coordinacin de Compilacin
y Sistematizacin de Tesis para su publicacin en el Semanario
Judicial de la Federacin y su Gaceta, y hganse del conocimiento de
las Salas de esta Suprema Corte, de los Tribunales Colegiados de
Circuito y Juzgados de Distrito, en acatamiento a lo previsto en el
artculo 195 de la Ley de Amparo; y, en su oportunidad, archvese el
expediente.
66
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
As lo resolvi el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la
Nacin:
En relacin con el punto resolutivo Primero:
Se aprob por unanimidad de once votos de los seores
Ministros Aguirre Anguiano, Cosso Daz, Luna Ramos, Franco
Gonzlez Salas, Zaldvar Lelo de Larrea, Pardo Rebolledo, Aguilar
Morales, Valls Hernndez, Snchez Cordero de Garca Villegas, Ortiz
Mayagoitia y Presidente Silva Meza (los seores Ministros Aguirre
Anguiano y Ortiz Mayagoitia integraron el Pleno en la sesin celebrada
el doce de marzo de dos mil doce).
En relacin con el punto resolutivo Segundo:
Por mayora de diez votos de los seores Ministros Gutirrez
Ortiz Mena, quien se reserv el derecho a formular un voto
concurrente; Luna Ramos, quien se manifest a favor de las
consideraciones relacionadas con la prevalencia de la Constitucin y
se apart del resto; Franco Gonzlez Salas, quien indic que
formulara un voto concurrente; Zaldvar Lelo de Larrea, quien
manifest que hara un voto aclaratorio y concurrente para explicar el
consenso al que se lleg y el sentido de su voto a pesar de que en los
lmites tuvo un criterio distinto; Pardo Rebolledo, quien se reserv el
derecho de formular voto concurrente; Aguilar Morales, con reservas
respecto de las consideraciones y, en su caso, realizara un voto
concurrente; Valls Hernndez, reservndose el derecho de hacer un
voto concurrente; Snchez Cordero de Garca Villegas, reservndose
su derecho a voto concurrente en relacin con los lmites; Prez
Dayn, quien se manifest a favor del reconocimiento de la
67
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
prevalencia constitucional y Presidente Silva Meza, quien reserv su
derecho de formular voto concurrente para aclarar su posicin de
entendimiento constitucional del texto propuesto y, a reserva de ver el
engrose, aclarara u opinara sobre las supresiones que se pretenden
hacer, sin variar su posicin en el sentido, se aprob la determinacin
consistente en que debe prevalecer, con carcter de jurisprudencia, el
criterio sostenido por el Tribunal Pleno en el sentido de que las normas
contenidas en tratados internacionales de los que el Estado Mexicano
sea parte que reconocen derechos humanos tienen la misma fuerza
normativa que las normas contenidas en la Constitucin Poltica de los
Estados Unidos Mexicanos que reconocen esas prerrogativas
fundamentales y que cuando en la Constitucin haya una restriccin
expresa al ejercicio de los derechos humanos, se deber estar a lo
que indica el texto constitucional. El seor Ministro Cosso Daz vot
en contra y se reserv el derecho de formular voto particular.
Por mayora de seis votos de los seores Ministros Gutirrez
Ortiz Mena, Cosso Daz, Zaldvar Lelo de Larrea, Valls Hernndez,
Snchez Cordero de Garca Villegas y Presidente Silva Meza, se
aprob la determinacin consistente en que debe prevalecer, con
carcter de jurisprudencia, el criterio sostenido por el Tribunal Pleno
en el sentido de que la jurisprudencia emitida por la Corte
Interamericana de Derechos Humanos es vinculante para los jueces
mexicanos siempre que sea ms favorable a la persona. Los seores
Ministros Luna Ramos, Franco Gonzlez Salas, Pardo Rebolledo,
Aguilar Morales, quien reconoci que las sentencias que condenan al
Estado Mexicano s son vinculantes, y Prez Dayn votaron en contra.
En relacin con el punto resolutivo Tercero:
68
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Se aprob por unanimidad de once votos de los seores
Ministros Gutirrez Ortiz Mena, Cosso Daz, Luna Ramos, Franco
Gonzlez Salas, Zaldvar Lelo de Larrea, Pardo Rebolledo, Aguilar
Morales, Valls Hernndez, Snchez Cordero de Garca Villegas, Prez
Dayn y Presidente Silva Meza.
La siguiente votacin no se refleja en puntos resolutivos:
Por unanimidad de once votos de los seores Ministros
Gutirrez Ortiz Mena, Cosso Daz, Luna Ramos, Franco Gonzlez
Salas, Zaldvar Lelo de Larrea, Pardo Rebolledo, Aguilar Morales,
Valls Hernndez, Snchez Cordero de Garca Villegas, Prez Dayn y
Presidente Silva Meza, se aprob la determinacin relativa a que en la
presente contradiccin de tesis no ha quedado sin materia.
El seor Ministro Presidente Juan N. Silva Meza dej a salvo el
derecho de los seores Ministros para que formulen los votos que
estimen pertinentes y declar que el asunto se resolvi en los trminos
precisados.
En la sesin privada extraordinaria celebrada el cinco de
diciembre de dos mil trece el texto del engrose del apartado I La
posicin jerrquica de los tratados internacionales en materia de
derechos humanos en relacin con la Constitucin del considerando
Quinto de la sentencia dictada en la contradiccin de tesis 293/2011
se aprob por unanimidad de diez votos de los seores Ministros
Gutirrez Ortiz Mena, Luna Ramos, con salvedades, Franco Gonzlez
Salas, Zaldvar Lelo de Larrea, Pardo Rebolledo, Aguilar Morales, con
salvedades, Valls Hernndez, Snchez Cordero de Garca Villegas,
Prez Dayn y Presidente Silva Meza con la modificacin aceptada
por el seor Ministro ponente Arturo Zaldvar Lelo de Larrea,
69
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
consistente en agregar una diversa indicacin en el sentido de que
cuando en la Constitucin haya una restriccin expresa al ejercicio de
los derechos humanos, se deber estar a lo que indica el texto
constitucional. El seor Ministro Cosso Daz no particip en esta
votacin al haber votado en contra de la propuesta modificada del
considerando quinto apartado I en la sesin pblica del tres de
septiembre de dos mil trece.
Asimismo se aprob por unanimidad de once votos de los
seores Ministros Gutirrez Ortiz Mena, Cosso Daz, Luna Ramos,
Franco Gonzlez Salas, Zaldvar Lelo de Larrea, Pardo Rebolledo,
Aguilar Morales, Valls Hernndez, Snchez Cordero de Garca
Villegas, Prez Dayn y Presidente Silva Meza, el texto de las
consideraciones del apartado II El valor de la jurisprudencia emitida
por la Corte Interamericana de Derechos Humanos del considerando
quinto del engrose de la presente contradiccin de tesis.
El seor Ministro Presidente Juan N. Silva Meza declar que el
texto de las consideraciones de fondo del engrose de la sentencia
emitida en la contradiccin de tesis 293/2011 qued aprobado en los
trminos antes precisados.
Firman los seores Ministros Presidente y el Ponente, con el
Secretario General de Acuerdos que autoriza y da fe.
PRESIDENTE:
MINISTRO JUAN N. SILVA MEZA
70
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
PONENTE:
MINISTRO ARTURO ZALDVAR LELO DE LARREA
SECRETARIO GENERAL DE ACUERDOS:
LIC. RAFAEL COELLO CETINA
Esta hoja corresponde a la Contradiccin de Tesis 293/2011, entre las
sustentadas por el Primer Tribunal Colegiado en Materias Administrativas y de
Trabajo del Dcimo Primer Circuito y el Sptimo Tribunal Colegiado en Materia
Civil del Primer Circuito, fallada el tres de septiembre de dos mil trece, en el
sentido siguiente: PRIMERO. S existe contradiccin de tesis entre las sustentadas
por el Primer Tribunal Colegiado en Materias Administrativa y de Trabajo del
Dcimo Primer Circuito y el Sptimo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer
Circuito, en trminos del considerando Cuarto de esta resolucin. SEGUNDO.
Deben prevalecer con carcter de jurisprudencia, los criterios sustentados por este
Tribunal Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nacin, en los trminos
precisados en el ltimo considerando de esta resolucin.
En trminos de lo previsto en los artculos 3, fraccin II, 13, 14 y 18 de la Ley
Federal de Transparencia y Acceso a la Informacin Pblica Gubernamental, en
esta versin pblica se suprime la informacin considerada legalmente como
reservada o confidencial que encuadra en esos supuestos normativos. CONSTE.
71
VOTO PARTICULAR QUE FORMULA EL MINISTRO JOS RAMN
COSSO DAZ EN LA CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
En sesin de tres de septiembre de dos mil trece el Pleno de la
Suprema Corte resolvi por mayora de diez votos, la Contradiccin de
Tesis 293/2011. El tema de la misma era determinar la relacin de los
derechos humanos establecidos en la Constitucin y en los tratados
internacionales celebrados por el Estado mexicano, a efecto de lograr
la proteccin ms amplia a las personas. Mediante este criterio deba
darse una interpretacin nueva a lo dispuesto en el artculo 1
constitucional, reformado en junio de dos mil once1. Mi posicin fue en
contra de la propuesta final presentada y votada por el Pleno pues, a
mi juicio, lo que se resolvi resulta contrario a lo establecido en el
propio artculo 1.
Conviene aclarar aqu que en el proyecto sometido a la aprobacin del
Pleno de la Suprema Corte se recogieron buena parte de los
argumentos que expres en contra del proyecto originario que
discutimos en marzo de dos mil doce2. Por ello, en todo momento
manifest mi conformidad con la nueva posicin. Sin embargo y con
motivo de los cambios que a lo largo de las discusiones se fueron
introduciendo a la nueva propuesta, vot en contra del criterio que
finalmente se adopt.
I. Razones del disenso.
El motivo alegado en todo momento para introducirle cambios
sustanciales al proyecto fue la bsqueda de una solucin operativa en
materia de derechos humanos. Invocando de manera reiterada la
necesidad de encontrar una solucin de consenso al problema que la
1
2
Publicada en el Diario Oficial de la Federacin el viernes diez de junio de dos mil once.
Discusiones del doce, trece y quince de marzo de dos mil doce.
VOTO PARTICULAR
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Corte tena que resolver, como si lo importante del caso fuera el
establecimiento de un criterio, cualquiera que ste fuera. La razn
para no compartir este curso de accin es que a mi juicio hay
decisiones, en este caso constitucionales, que no pueden tener al
consenso como nica razn de ser. En una diversidad de temas es
plausible tratar de construir consensos en la Suprema Corte, pero
considero que hay decisiones en las que la conviccin sobre la
interpretacin que debe darse a la Constitucin no puede ceder. El
tema de los derechos humanos tiene estas caractersticas. El que ello
sea as no resulta de una creencia personal, sino del modo como el
rgano reformador de la Constitucin decidi cambiar en junio de dos
mil once la esencia de la Constitucin, poniendo una carga
extraordinariamente importante en la proteccin a los derechos
humanos a partir del principio pro persona. Lo que se transform fue la
antropologa constitucional misma, determinando de un modo
completamente distinto la posicin de las personas frente a las
autoridades estatales. Suponer que este reconocimiento puede ser
instrumentalizado en aras de lograr consensos entre los ministros, es
tanto como generar un espacio de libre disposicin judicial frente a lo
establecido por un rgano democrtico cuya legitimidad no est en
duda.
Mi segundo punto de disenso frente a la resolucin finalmente
aprobada por la mayora del Tribunal tiene que ver con la aplicacin
real del criterio de jerarqua para relacionar los derechos humanos
establecidos en la Constitucin y en los tratados internacionales, a
pesar de que en la propia resolucin se indique expresamente que
este criterio no resulta aplicable. Si el prrafo segundo del artculo 1
dispone que a las personas se les dar en todo momento la proteccin
ms amplia en trminos de lo que dispongan los derechos humanos
de fuente constitucional o convencional, no puede establecerse la
prevalencia de las normas constitucionales en los casos en que
2
VOTO PARTICULAR
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
establezcan restricciones, sin admitir que con ello se incorpora
expresamente un criterio de jerarqua constitucional.
El artculo 133 establece que un tratado internacional se incorpora al
orden jurdico mexicano cuando su contenido y su proceso de
aprobacin son acordes con la Constitucin. Hasta este momento la
Constitucin es jerrquicamente superior al tratado, sencillamente por
prever sus requisitos de validez. Sin embargo, a partir de ah el
artculo 1 da lugar a una operacin normativa completamente
diferenciada, que nada tiene que ver ya con cuestiones de jerarqua.
Como acabo de sealarlo en el prrafo anterior, la reforma de junio de
dos mil once implic que deben hacerse operaciones normativas a
partir del principio pro persona tanto con los derechos humanos
contenidos en los tratados internacionales de los que Mxico es parte
como con aqullos reconocidos en la Constitucin, sin establecer
ninguna jerarqua entre ellos.
La posicin adoptada por el Constituyente mexicano se viene
construyendo en el mundo desde hace ms de cincuenta aos a partir
del principio de dignidad de la persona. Las razones histricas son
harto conocidas y no tiene sentido repetirlas aqu. Lo que s interesa
sealar es que esta idea y sus desarrollos se han ido incorporando a
las constituciones y tratados internacionales, con lo cual han dejado de
ser meras construcciones de la filosofa poltica o del iusnaturalismo,
para constituirse sin ms en derecho positivo. Con este carcter, la
Constitucin y los tratados internacionales obligan a realizar
operaciones normativas con los derechos humanos determinados por
el legislador democrtico. Este cambio radical en el modo de
entendimiento de nuestro orden jurdico tiene que aceptarse a
plenitud, salvo que se quiera mantener un positivismo ideolgico
donde slo se acepta la existencia de la Constitucin siempre que no
contenga elementos que resulten contrarios a las convicciones
personales.
3
VOTO PARTICULAR
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Con la reforma de dos mil once, el Constituyente, como rgano
democrticamente legtimo, gener una solucin novedosa que puede
no gustar a muchas personas. No obstante, al asumir el cargo de
ministro de la Suprema Corte protest guardar y hacer guardar la
Constitucin y las leyes que de ella emanen. Es por ello que
independientemente de la posicin que se tenga con respecto a la
idea derechos humanos, en la Constitucin se les ha otorgado un
estatus especfico que debe ser cabalmente garantizado. Lo dispuesto
en ella nos conduce a maximizar la interpretacin conjunta de los
derechos humanos de fuente constitucional y convencional en aras de
otorgarle la mayor proteccin posible a las personas. Desde el
momento en que se dice que ello ser as salvo cuando exista una
restriccin constitucional expresa, se est desconociendo lo dispuesto
en el propio texto constitucional en razn del desplazamiento que se
hace de los derechos de fuente convencional frente a lo dispuesto, no
como derecho, sino como restriccin, por la Constitucin nacional,
utilizndose as un criterio jerrquico.
Cuando la Constitucin dispone en el primer prrafo del artculo 1 que
el ejercicio de los derechos humanos no podr restringirse ni
suspenderse, salvo en los casos bajo las condiciones que esta
Constitucin establece, ello tambin debe entenderse bajo la clave
interpretativa del principio pro persona. Por lo mismo, debe referirse
nica y exclusivamente a las condiciones establecidas en varios
prrafos del artculo 29 de la propia Constitucin. Estas no son
expresiones retricas, sino tcnicas y especficas que deben utilizarse
slo en estos casos, sin extenderse a cualquier restriccin que pudiera
entenderse contiene la Constitucin. Las ltimas reformas a los
artculos 1 y 29 tienen la misma gnesis, por lo que no deben ser
interpretadas con orientaciones diversas y aun contrarias entre s.
La posicin mayoritaria genera una regla universal de interpretacin
por virtud de la cual el derecho convencional cede frente al derecho
4
VOTO PARTICULAR
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
constitucional desplazando la posibilidad de resolver los problemas
caso por caso aplicando efectivamente el principio pro persona. No es
verdad, como sostiene la resolucin votada por la mayora, que la
interpretacin generada por ella permita la ponderacin caso por caso
de todos los derechos humanos. Para que ello fuere as, deba darse
la plena igualdad entre los derechos humanos de fuente constitucional
y de fuente convencional. Pero como se introdujo una diferenciacin
entre uno y otro tipo de derechos al darle preeminencia jerrquica a
las restricciones constitucionales, tal igualdad se rompi. Lo ms que
puede hacerse en este tipo de operacin es determinar si en la
situacin concreta que se enfrente existe tal restriccin para, a partir
de ah, desplazar al derecho humano establecido en un tratado.
Es cierto que siempre que nos encontramos frente a una colisin de
derechos debe generarse una interpretacin como forma de resolucin
de estos conflictos. sta ha sido una de las funciones histricas del
constitucionalismo. Sin embargo, lo que se gener con la adopcin de
este criterio es una regla hermenutica de carcter general para
decidir siempre en favor de la norma constitucional frente a la
convencional; esta no es una regla de ponderacin, sino una regla de
preferencia de una fuente sobre otra. Consecuentemente, al
mantenerse una regla de jerarqua, se elimin la posibilidad de aplicar
el principio pro persona para eliminar los conflictos entre normas de
distinta fuente.
La resolucin adoptada significa una regresin grave respecto a lo que
habamos votado en otros asuntos en los que, precisamente, existan
soluciones
diversas
entre
las
normas
convencionales
constitucionales en materia de derechos humanos. Ello es as porque
en al menos dos casos, la Suprema Corte haba considerado a los
derechos de una u otra fuente en condiciones de perfecta igualdad y
se haba extrado, de entre todos ellos, los que mejor protegieran a la
persona: uno de ellos, relativo al lugar de compurgacin de las penas
5
VOTO PARTICULAR
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
cerca del domicilio familiar; el otro, relacionado con los lmites y
modalidades del trabajo forzado3. Por ello, el efecto de la resolucin
mayoritaria resulta contrario al principio de progresividad establecido
en el prrafo tercero de la propia Constitucin.
Lo verdaderamente grave del criterio adoptado por la Corte, y de ah
mi disenso, es que impedir llevar a cabo un libre juego de apreciacin
o balance entre los derechos humanos de fuente constitucional y los
de fuente convencional y, con ello, afectar el entendimiento cabal del
principio pro persona. La razn final del peso otorgado a las normas
constitucionales es su jerarqua, asunto ste que no fue introducido
por el Constituyente en la reforma de junio de dos mil once. Por todo lo
anterior, me resulta inaceptable el aparente consenso logrado por la
mayora para llegar a esta conclusin, expresado en la inevitable
contradiccin interna de la primera de las tesis resultantes, de rubro:
DERECHOS HUMANOS CONTENIDOS EN LA CONSTITUCIN Y
EN LOS TRATADOS INTERNACIONALES. CONSTITUYEN EL
PARMETRO
DE
CONTROL
DE
REGULARIDAD
CONSTITUCIONAL, PERO CUANDO EN LA CONSTITUCIN HAYA
UNA RESTRICCIN EXPRESA AL EJERCICIO DE AQULLOS, SE
DEBE
ESTAR
LO
QUE
ESTABLECE
EL
TEXTO
CONSTITUCIONAL.
La contradiccin es evidente desde el rubro de la tesis, pero se hace
an ms grave al contrastarla con la segunda de las tesis emitidas en
este caso, ya que no es posible sostener que los criterios de la Corte
Interamericana de Derechos Humanos resultan vinculantes para los
jueces nacionales, sin reiterar la salvedad hecha en la primera de
ellas. El rubro de la segunda tesis es: JURISPRUDENCIA EMITIDA
POR LA CORTE INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS. ES
VINCULANTE PARA LOS JUECES MEXICANOS SIEMPRE QUE
SEA MS FAVORABLE A LA PERSONA.
3
Son el amparo en revisin 358/2011 y la accin de inconstitucionalidad 155/2007.
VOTO PARTICULAR
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Es por todas estas razones que vot en contra de la resolucin de la
mayora en este primer punto, compartiendo el criterio contenido en la
segunda de las tesis emitidas.
____________________________
Ministro Jos Ramn Cosso Daz
RMMG/LPRZ/mvr
VOTO PARTICULAR QUE FORMULA EL SEOR MINISTRO
LUIS MARA AGUILAR MORALES, RESPECTO DE LA
RESOLUCIN PRONUNCIADA POR EL PLENO DE LA
SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIN EN LA
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
En la ejecutoria correspondiente se analizan dos temas
jurdicos respecto de los cuales los Tribunales Colegiados
participantes sostuvieron criterios discrepantes, y se establece,
como el primer criterio que debe prevalecer con carcter de
jurisprudencia,
esencialmente,
que
los
derechos
humanos
contenidos en los tratados internacionales constituyen, junto con
los establecidos en la Constitucin Poltica de los Estados Unidos
Mexicanos, el parmetro de regularidad constitucional, pero que
cuando en la Ley Fundamental se prevea una restriccin al
ejercicio de aqullos, se debe estar al texto constitucional.
Como un segundo criterio, se sostiene que la jurisprudencia
emitida por la Corte Interamericana de Derechos Humanos es
vinculante para los jueces mexicanos, siempre que sea ms
favorable a la persona.
Pues bien, en relacin con el primer tema, coincido plena y
enfticamente con que los derechos humanos deben ser
considerados como el parmetro de respeto a la dignidad de la
persona; y que el reconocimiento constitucional de esos derechos
encuentra
justificacin
en
los
principios
de
autonoma,
inviolabilidad y dignidad de todas las personas y tiene como
finalidad ltima posibilitar que desarrollen su propio plan de vida.
VOTO PARTICULAR EN LA CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Sin embargo, difiero de lo que se determina en la resolucin
de la contradiccin, en el sentido de que los preceptos de la
Constitucin Federal y las normas de derechos humanos
previstas
en
tratados
internacionales
no
se
relacionan
jerrquicamente, sino que con la reforma constitucional de diez de
junio de dos mil diez estos ltimos se incorporan al catlogo
constitucional de derechos humanos.
Yo tengo una lectura un poco distinta respecto de la
integracin
de
las
normas
de
derechos
humanos
la
Constitucin, sin desconocer la importancia y la necesidad
imperiosa,
vinculada
por
la
disposicin
constitucional,
de
interpretarla y tomarla en consideracin.
A mi juicio, los contenidos de los tratados internacionales se
constituyen, en la materia de derechos humanos, como reglas de
interpretacin y parmetros de su alcance. Estimo que se es el
verdadero sentido que imprimi el Constituyente en el artculo 1,
pues no puede entenderse el nuevo texto constitucional como si
estuviera estableciendo un sistema de normas, que generara
conflictos de jerarquas en su aplicacin, generalmente inevitables
ante una posible o aparente contradiccin entre ellas, sino que,
por el contrario, cuando la norma constitucional establece que
todas
las
personas
gozarn
de
los
derechos
humanos
reconocidos tanto en la Constitucin como en los tratados
internacionales, en realidad est estableciendo un sistema de
derechos humanos establecidos en nuestra Constitucin, pero
conceptualmente racionalizados por los alcances establecidos en
los tratados internacionales y no como un sistema paralelo de
2
VOTO PARTICULAR EN LA CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
normas, con lo cual todo conflicto de normas entre las
internacionales y la Constitucin desaparece para dar lugar a un
sistema de derechos humanos contenido en la norma de nuestra
Constitucin y complementado en las reglas conceptuales que de
manera subsidiaria se encuentran en los tratados internacionales
suscritos por Mxico, reafirmando con ello la supremaca
constitucional
determinada
por
el
artculo
133
de
esta
Constitucin.
Lo dispuesto en la ltima parte del primer prrafo del artculo
1 constitucional encuentra plena justificacin de supremaca, en
tanto que dispone que el ejercicio de los derechos humanos no
podr restringirse ni suspenderse, salvo en los casos y bajo las
condiciones que esta Constitucin establece; sin que pueda
predicarse, a mi juicio, esa supremaca respecto de las normas en
materia
de
derechos
humanos
previstas
en
tratados
internacionales, como se sostiene en la presente resolucin.
La Constitucin es la Norma Suprema que se alza como
referente, como paradigma fundamental al que deben someterse
todas las otras normas; la Constitucin no puede sino estar como
referente nico e insuperable de toda legitimidad y legalidad en el
pas, a riesgo, incluso, de perder su cualidad de norma de
referencia fundante y origen de creacin institucional, que a ella
debe ajustarse y someterse toda otra norma que se genere dentro
de su mbito general de aplicacin, pues de la Constitucin deriva
todo el marco normativo, incluso, desde luego, los tratados
internacionales, incluyendo los de derechos humanos, y por ello la
VOTO PARTICULAR EN LA CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Constitucin no puede en ningn caso perder su preeminencia
sobre cualquier otra norma.
Si bien habra que hacer una interpretacin pro persona,
esto no podra conllevar a que se prefiera la aplicacin de las
normas establecidas en los tratados internacionales sobre la
Constitucin, porque esto implicara que se encontraran por
encima de la Constitucin, al dejar de aplicar simplemente una
norma constitucional, dando as preeminencia a la norma
internacional respecto de una norma constitucional, con el riesgo
de que sea ya no el juez el que determine la interpretacin de la
norma sino propiamente el que reforme, incluso, de hecho, la
Constitucin misma.
An ms, el artculo 2 de la Convencin Americana de
Derechos Humanos seala que para poder hacer efectivos los
derechos contenidos en ella, ser necesario que los Estados, si
no lo han hecho, lleven a cabo las medidas legislativas para
hacerlos efectivos; lo que denota que no basta una simple
desaplicacin
de
la
norma
nacional
una
aplicacin
indiscriminada de la norma internacional, sino que sera necesario
que el Legislador, o si fuese necesario el Constituyente, como
dispone y exige el artculo 2 de la Convencin, reformen las
normas correspondientes para hacer efectivos esos derechos.
Indudablemente que el compromiso adoptado por Mxico en
esta Convencin es, atendiendo a este artculo 2, respetuoso de
la soberana, autonoma y autodeterminacin de cada Estado, por
lo que el desconocimiento de las normas internas y ms de las
VOTO PARTICULAR EN LA CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
constitucionales, sin ms requisito que ignorarlas y no aplicarlas,
sera una contravencin, incluso, al propio tratado.
Es necesario, desde luego analizar la relacin jurdica que
se da entre los tratados y lo dispuesto por la Constitucin, lo que
resuelve el artculo 1, parte final, y el artculo 133 de la
Constitucin, de los que derivan que las normas previstas en la
Ley Fundamental tienen una parcial fuerza jurdica activa o
derogatoria sobre las normas que en materia de derechos
humanos prevean los referidos tratados, pues en abono a que
todo instrumento internacional para ser vlido debe apegarse a lo
previsto en la Constitucin, el prrafo primero en comento precisa
con toda claridad, en su parte final, que las nicas restricciones al
ejercicio de los derechos humanos reconocidos tanto en la Norma
Fundamental como en los tratados internacionales sern las
previstas por la propia Constitucin.
As, a mi juicio no puede predicarse una falta de relacin
jerrquica entre las normas de derechos humanos previstas en
tratados internacionales y los preceptos constitucionales, pues
aun con la reforma constitucional sigue imperando la supremaca
constitucional.
En esta medida, lo que se determin finalmente en la
contradiccin por el Tribunal Pleno, y con lo cual coincido
plenamente, es en el sentido de que en caso de que en la
Constitucin se prevea una restriccin a un derecho humano,
deber prevalecer lo establecido en el texto constitucional, a mi
juicio deriva, precisamente, de su supremaca.
VOTO PARTICULAR EN LA CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Considero que lo que establece el segundo prrafo del
artculo 1 constitucional son reglas de interpretacin de las
normas relativas a derechos humanos, recogiendo el principio pro
persona, lo que permite fijar el alcance de dicha norma, buscando
la mayor proteccin de los derechos humanos, como por ejemplo,
tornar en plenamente exigibles las prerrogativas de esa ndole
previstas en tratados internacionales, aun cuando no se refiera a
ello la Constitucin, pero de ninguna manera permite desconocer
las normas supremas que establecen las restricciones a los
derechos humanos sealados en la Constitucin Federal; por lo
que considero que debi concluirse expresamente que la
Constitucin tiene un carcter preeminente de supremaca por
sobre toda otra norma jurdica, interna o externa, de origen
internacional o con motivo de reconocer un derecho humano,
sealando que la norma constitucional prevalece frente a
cualquier otra.
Nuestra Norma Fundamental es la que paradjicamente le
da existencia y validez a las normas internacionales, adems de
que incluso los derechos humanos contenidos en la propia
Constitucin deben limitarse a la amplitud que las restricciones
que ella misma impone, por lo que en igualdad de circunstancias
las
normas
internacionales
de
derechos
humanos
deben
someterse a esas mismas restricciones, lo que deriva de la
naturaleza de Norma Suprema de la Constitucin, que siempre
debe prevalecer, pues as lo seala el propio artculo 1, y as ha
sido diseado por el pueblo de Mxico, a travs de su
Constituyente permanente.
6
VOTO PARTICULAR EN LA CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
A mi juicio es un contrasentido afirmar que las normas de
derechos humanos previstas en tratados internacionales y las
establecidas en la Constitucin Federal no se relacionan en
trminos jerrquicos, y luego decir que aun as prevalecen las
restricciones establecidas en la Constitucin. Coincido en que
stas ltimas deben prevalecer, pero precisamente porque s
existe una relacin jerrquica entre dichas normas, que deriva del
principio de supremaca constitucional.
Si bien en la resolucin de la contradiccin de alguna
manera se acoge el criterio de que deben imperar las
restricciones constitucionales, se afirma que no existe relacin
jerrquica entre las normas de derechos humanos contenidas en
tratados internacionales y las establecidas en la Constitucin
Federal, con lo cual no coincido.
Es cierto que dichas normas podran, en su caso,
interpretarse de manera armnica y tambin que, en caso de que
alguna norma de un tratado internacional versara sobre algn
derecho humano no previsto en la Constitucin o con una
amplitud mayor del previsto en ella, podra atenderse a lo previsto
por el tratado, esto tendra que atender siempre a las restricciones
constitucionales, lo que a mi juicio implica precisamente que las
normas de que se trata s se relacionan en trminos jerrquicos,
pues es del principio de supremaca constitucional que a mi
juicio sigue siendo referente, aun tratndose de normas en
materia de derechos humanos, del que deriva que sean las
restricciones o limitaciones de la Constitucin las que prevalezcan
en caso de antinomia.
7
VOTO PARTICULAR EN LA CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Ahora bien, tomando en cuenta que el Tribunal Pleno
finalmente determin, en la resolucin de la contradiccin de que
se trata, que cuando en la Constitucin se prevea una restriccin
al ejercicio de derechos humanos previstos en tratados
internacionales, se debe estar al texto constitucional, considero
que esa prevalencia de las restricciones constitucionales debi
quedar claramente plasmada a lo largo de todo el estudio, a
efecto de que la resolucin no generara confusiones o fuera,
incluso, contradictoria.
As, cuando se acota como requisito material de validez de
los tratados internacionales incorporados al sistema jurdico, el no
contrariar los derechos humanos previstos en la Constitucin
Federal y en otros tratados internacionales, a mi juicio se debi
mencionar que tampoco deben ser contrarios a las restricciones
establecidas por la propia Norma Fundamental.
Igualmente, considero que se debi hacer mencin expresa
a la prevalencia de las restricciones constitucionales cuando se
hace referencia a que las antinomias que eventualmente puedan
suscitarse deben resolverse aplicando el principio pro persona.
Cabe apuntar que, a mi juicio, lo que prev el artculo 1
constitucional en relacin con este principio es que las normas
relativas a los derechos humanos se interpreten de conformidad
con la propia Constitucin y con los tratados internacionales de la
materia, favoreciendo en todo tiempo a las personas la proteccin
ms amplia; esto es, lo que establece es la manera en que se
VOTO PARTICULAR EN LA CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
deben interpretar dichas normas, y no un criterio para determinar
cul norma aplicar.
Considero que no debe confundirse interpretacin con
aplicacin. El hecho de que la norma en cuestin seale que las
normas de derechos humanos se deben interpretar conforme al
principio pro persona implica, precisamente, que cuando puedan
darse varias interpretaciones, se prefiera aquella que sea ms
favorable a la persona; pero no creo que tenga el alcance de que,
con el pretexto de hacer una interpretacin pro persona, lo que se
haga realmente sea una inaplicacin de normas constitucionales,
ya que no creo que stas puedan interpretarse en el sentido de
que no dicen lo que dicen. Debe tenerse siempre en cuenta que lo
que seala el artculo 1 constitucional es preferir la interpretacin
y no la aplicacin, ms favorable.
Por otra parte, no coincido con el criterio que se determina
que debe prevalecer con el carcter de jurisprudencia, respecto
del segundo tema jurdico analizado, pues considero que las
interpretaciones, criterios jurisprudenciales o precedentes de la
Corte Interamericana de Derechos Humanos deben entenderse
como orientadoras respecto del alcance interpretativo de las
normas contenidas en la Convencin de San Jos.
A mi juicio, la vinculacin se entiende respecto de las
sentencias que emite la Corte Interamericana de Derechos
Humanos que son, desde luego, vinculantes ineludiblemente para
las partes, cuando el Estado mexicano es parte en un proceso en
VOTO PARTICULAR EN LA CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
el cual se le imponen ciertas condiciones en la resolucin, ya que
desde luego est vinculado a su cumplimiento.
Considero que, como en general sucede con los criterios
jurisprudenciales o los precedentes, estos criterios trascienden al
caso concreto y establecen un criterio de interpretacin respecto
de lo que puede o debe entenderse en el alcance de una norma
determinada.
No coincido con que se seale que la jurisprudencia de la
Corte Interamericana es vinculante de manera general, porque
para m ese adjetivo es aplicable nicamente a las resoluciones
que condenan a algn Estado y, por lo tanto, yo no podra ms
que calificar los criterios del referido tribunal internacional como
orientadores respecto de los alcances que debe darse a cierta
norma del convenio o del tratado y as establecer cul es el
parmetro para poder entender esa norma.
Considero que aun los criterios que derivan de las
sentencias vinculatorias para el Estado mexicano son criterios de
interpretacin que son orientadores para futuras cuestiones o
aplicaciones de las normas contenidas en el tratado. La
vinculacin se da, para m, en relacin con las sentencias, pero
no con la jurisprudencia.
Tampoco coincido con el aserto de que la jurisprudencia de
la Corte Interamericana es una extensin del tratado, pues
parecera que se est haciendo un addendum al tratado, que no
lo es, desde luego, como si se estuviera agregando alguna
disposicin no pactada entre las partes que esa es la naturaleza
10
VOTO PARTICULAR EN LA CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
de todo tratado, pues considero que simple y sencillamente se
trata de los criterios de interpretacin sobre las normas
contenidas, en este caso, en la Convencin Americana Sobre
Derechos Humanos.
De tal manera, considero que la jurisprudencia de la Corte
Interamericana es un criterio orientador que habr a su vez de
someter al juzgador mexicano a un anlisis y ponderacin
respecto de los alcances que considere pertinentes para hacer
efectivo el principio pro homine, considerando siempre, desde
luego, las posibles restricciones que nuestra Constitucin
establezca y que inciden necesariamente en los alcances de esta
interpretacin y aplicacin, no slo hecha por el Tribunal
mexicano, sino tambin por el propio Tribunal Internacional.
Desde ese punto de vista, yo estara en contra de las
consideraciones, terminologa y determinacin que se adopta en
relacin con este tema jurdico.
En esa medida, si bien estoy de acuerdo, esencialmente,
con el primer criterio que se sostiene en la resolucin de la
contradiccin de tesis de que se trata, no coincido con todos los
argumentos en que se sustenta, ni tampoco con el segundo de los
criterios establecidos.
MINISTRO
LUIS MARA AGUILAR MORALES
TMHR/nco
11
V O T O
CONCURRENTE
QUE FORMULA EL MINISTRO ALFREDO GUTIRREZ ORTIZ MENA EN
RELACIN CON LA CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011, RESUELTA
POR EL PLENO DE LA SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIN
EN SESIN DE TRES DE SEPTIEMBRE DE DOS MIL TRECE.
La resolucin tomada el da de hoy es de suma relevancia para el
entendimiento del modelo constitucional mexicano, pues resuelve una
interrogante central sobre los componentes del parmetro de regularidad o
validez constitucional despus de la entrada en vigor de las reformas
constitucionales en materia de derechos humanos de verano de 2011.
A partir de esta decisin, tanto los jueces constitucionales y cualquier
autoridad judicial, a partir del control difuso, como tambin la generalidad de
los habitantes de este pas podrn partir de una misma premisa: los
derechos humanos reconocidos en la Constitucin y en los tratados
internacionales ratificados por Mxico son condicin necesaria de validez de
todas las normas y actos de autoridad.
La conclusin a la que lleg esta Suprema Corte en la presente
contradiccin de tesis es que los derechos humanos, independientemente
de su fuente jurdica, constituyen el parmetro de regularidad constitucional
de cualquier disposicin normativa o acto relevante para el sistema jurdico,
teniendo en cuenta que cuando en la Constitucin exista una restriccin
expresa al ejercicio de estos derechos, deber estarse a lo que establece el
texto constitucional.
Coincido plenamente con estos dos razonamientos. Tras la adicin del
actual contenido del artculo 1 constitucional, la jerarqua constitucional es
una propiedad que debe predicarse no slo de los derechos humanos
reconocidos en la Constitucin, sino tambin de aquellos reconocidos en los
tratados internacionales ratificados por Mxico; esto es, los tratados
internacionales no son norma constitucional in toto, sino nicamente los
derechos humanos ah reconocidos.
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
VOTO CONCURRENTE
En este sentido, la relacin normativa entre los derechos humanos de
fuente internacional y las normas constitucionales no se explica por el
principio de jerarqua normativa, sino por el de coherencia, de conformidad
con los principios de universalidad, interdependencia, indivisibilidad y
progresividad, introducidos por el Poder Constituyente Permanente, como
instrumentos de interrelacin de contenidos materiales que exigen un
tratamiento dirigido a mantener una integridad de dichos derechos.
As, el motivo del presente voto concurrente es doble: 1) justificar la
introduccin de una premisa adicional en el razonamiento de la mayora de
los integrantes del Tribunal Pleno respecto al estatus constitucional de los
derechos humanos y 2) precisar qu debe de entenderse cuando se habla
de una restriccin al ejercicio de los mismos.
En mi opinin, en relacin con esto ltimo, el concepto de restricciones al
ejercicio de los derechos humanos slo establece una premisa inicial
dentro de un debate destinado a ser continuo, pues estimo que es un
concepto controvertido que depende de una determinada concepcin del
modelo constitucional, cuyo desarrollo ser materia de la jurisprudencia de
la Dcima poca.
Ante tal situacin, el presente voto se organizara en dos apartados: en el
primero, me pronunciar sobre cules son las consecuencias de reconocer
la existencia de los derechos humanos y no de otorgarlos, lo que
agregara como premisa a la decisin de la mayora y, en el segundo,
expondr mi posicin personal sobre el alcance y forma de valorar las
restricciones expresas al ejercicio de los derechos humanos.
I
Dado que, tal como se adelant, los derechos humanos contenidos en la
Constitucin y en los tratados internacionales ratificados por Mxico tienen
en su conjunto un estatus constitucional que los convierte en el parmetro
de regularidad de todas las normas y actos, la premisa inicial que, desde mi
perspectiva, se debe agregar a la decisin de mayora es la idea que
encierra la sustitucin de un verbo central en el artculo 1 constitucional:
los derechos humanos no se otorgan, sino que se reconocen por el
2
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
VOTO CONCURRENTE
Estado. Esta sustitucin lingstica no slo es de orden sintctico, sino,
principalmente, semntico.
El anterior artculo 1 constitucional estableca que todo individuo gozar
de las garantas que otorga esta constitucin, mientras que su actual
redaccin establece que todas las personas gozarn de los derechos
humanos reconocidos en esta Constitucin y en los tratados
internacionales de los que el Estado Mexicano sea parte. Por tanto,
nuestra Constitucin es una que reconoce derechos humanos y no una
que otorga garantas. Esta es una modificacin no slo de palabras, sino
de filosofa constitucional con repercusiones trascendentes en la forma de
concebir al modelo de control constitucional.
En efecto, con el cambio de conceptos, considero que el Poder
Constituyente
Permanente
ha
plasmado
un
sentido
normativo
de
entendimiento transversal en todas las normas constitucionales con dos
implicaciones jurdicas relevantes:
La existencia de los derechos humanos es independiente a cualquier diseo
institucional, lo que en el modelo de estado constitucional equivale a afirmar
que su contenido tiene primaca sobre cualquier otra consideracin y
adquiere un carcter indisponible o indecidible para los rganos
productores del Estado, principalmente para el legislador, ya que si tales
derechos slo se reconocen, no cabe afirmar la existencia de una
competencia estatal de configurarlos en el sistema normativo; por ende,
cualquier determinacin que los menoscabe de manera injustificada
implicara, por lgica, un desconocimiento de su valor jurdico.
La relevancia de esta implicacin de indisponibilidad o supremaca de los
derechos humanos no slo es respecto del legislador, pues el control
constitucional de las leyes con base en contenidos sustantivos tiene
races
previas
en
nuestra
jurisprudencia,
sino
principalmente
una
consecuencia sistemtica en la comprensin integral del orden jurdico en
un doble aspecto para la resolucin de la presente contradiccin de tesis: i)
la configuracin sistemtica de la jerarqua normativa del sistema de fuentes
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
VOTO CONCURRENTE
y ii) forma de relacin de los derechos humanos con otras normas
constitucionales en el plano intra-constitucional.
En efecto, se insiste, si los derechos humanos se reconocen por su
contenido, no puede supeditarse ese reconocimiento a la fuente formal del
que deriven. El contenido material de esos derechos tiene supremaca, lo
que explica que el precepto constitucional en cita establezca que todas las
personas gozarn de los derechos humanos reconocidos en dos fuentes
que en este sentido son equivalentes: la Constitucin y los tratados
internacionales.
En otras palabras, la fuerza normativa de los derechos humanos no viene
dada por su fuente formal, esto es, no importa qu autoridad poltica los
reconozca; por el contrario, su fuerza constitucional deriva de su contenido,
cuya fuente no es otra que la obligacin del Estado de respetarlos y
protegerlos, por resultar inherentes a la dignidad humana.
Respecto a este razonamiento, es importante mencionar que la concepcin
de los derechos humanos como previos al Estado no quiere decir que la
Constitucin acoja una postura natural de los mismos, sino que el Poder
Constituyente Permanente consinti su justificacin de ndole internacional:
el respeto por la dignidad humana y autonoma personal, al derivar de
principios racionalmente aceptables. As, la aclaracin que se hace en este
voto concurrente debe de leerse desde el planto justificativo de los derechos
humanos y no meramente en su mbito conceptual o estrictamente
normativo.
Ahora bien, la segunda implicacin de aceptar que los derechos humanos
son reconocidos por el Estado radica en que ese acto de reconocimiento
impacta en los mbitos de aplicacin de las otras normas constitucionales.
Por tanto, las otras normas constitucionales tienen una funcin distinta a la
de configuracin clsicamente asociada a la funcin soberana segn la cual
el Estado otorga los derechos que estime convenientes.
Dicho de otra manera, las otras normas constitucionales se proyectan sobre
el trasfondo de esta existencia previa de los derechos humanos; regulan al
Estado Mexicano en diversos aspectos el modelo federal, el principio de
4
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
VOTO CONCURRENTE
divisin de poderes, la forma de Estado laico, los contenidos sociales y de
rectora econmica estatal no en un vaco, sino en un contexto normativo
previo. Consecuentemente, la relacin normativa de estas normas
orgnicas o de otro tipo con las que reconocen derechos humanos no se
entabla en pie de igualdad. Las tensiones interpretativas debern, prima
facie, resolverse conforme a esta condicin de precedencia de los derechos
humanos.
Esta relacin intra-sistemtica de las normas constitucionales se demuestra
cuando el artculo 1 constitucional establece que [l]as normas relativas a
los derechos humanos se interpretarn de conformidad con esta
Constitucin y con los tratados internacionales de la materia favoreciendo
en todo tiempo a las personas la proteccin ms amplia. El principio pro
persona slo se comprende plenamente, se recalca, si se toma en
consideracin la premisa de que los derechos humanos son reconocidos y
no otorgados.
Luego, dado que las normas constitucionales no tienen el potencial de
constituir, disear o configurar derechos humanos por simple concesin, sus
funciones normativas puede ser la de acotar su ejercicio. El derecho
humano slo es susceptible de reconocimiento autnomo por su existencia
independiente y previa, proveniente de la dignidad de la persona, por lo que
aquellas normas que establezcan alguna especie de limitacin o restriccin,
no redefinen el derecho o lo traducen o disean, sino en su caso, acotan,
limitan o suspenden su ejercicio por razones objetivas vlidas.
Sobre este contexto cobra sentido el primer prrafo del artculo 1
constitucional al establecer que el ejercicio de los derechos no podr
restringirse ni suspenderse, salvo en los casos y bajo las condiciones que
esta Constitucin establece.
Por lo tanto, la interrogante pertinente es determinar las condiciones de
aplicacin de tales restricciones constitucionales a los derechos humanos.
En mi opinin, por contemplarse en la Constitucin, la pregunta relevante no
es si las restricciones tienen valor jurdico, sino cules son sus condiciones
de aplicacin, tal como se explica en el siguiente apartado.
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
VOTO CONCURRENTE
II
Como se mencion en el prembulo de este voto, la decisin de la mayora
estableci que cuando en la Constitucin haya una restriccin expresa al
ejercicio de los derechos humanos, se deber estar a lo que indica la norma
constitucional.
En la sentencia no se definieron las condiciones de aplicacin de dichas
restricciones constitucionales, sino simplemente se afirm que son de
aplicacin vinculante. As, a mi juicio, de ello no se sigue que su
aplicabilidad deba adquirir una forma u otra. Las condiciones de aplicacin
de una norma no depende de afirmar su obligatoriedad, sino de la
naturaleza normativa de su contenido.
Por ejemplo, las reglas son aplicables bajo la metodologa de la subsuncin,
los principios mediante la ponderacin, y las normas competenciales en la
forma de reglas tcnicas; esto es, slo evaluando si su uso fue exitoso para
lograr un cierto resultado. Todas son idnticamente obligatorias, pero con
condiciones de aplicacin diferenciadas.
Por ende, la decisin de la mayora de los integrantes del Tribunal Pleno
slo resuelve la primera de las cuestiones la obligatoriedad de las
restricciones constitucionales, pero no contesta el punto central: las
condiciones de aplicacin de esas normas establecedoras de restricciones,
pues no se defini si son reglas, principios, normas competenciales, normas
definitorias,
etctera.
Posiblemente,
una
conceptualizacin
de
esa
naturaleza no podra ser materia de esta sola resolucin, pues parece que
las restricciones constitucionales son heterogneas y requieren una
exploracin caso por caso. No obstante, estimo necesario desarrollar
algunas de las razones de mi voto en este aspecto.
En principio, la determinacin de la mayora de los ministros tiene
fundamento textual en el artculo 1 constitucional, en donde se establece
que el ejercicio de los derechos humanos no podr restringirse ni
suspenderse, salvo en los casos y bajo las condiciones que esta
Constitucin
establece.
Para
algunos
de
ellos,
este
lineamiento
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
VOTO CONCURRENTE
constitucional se actualiza nicamente en los casos del artculo 29 de la
Constitucin Federal
Desde mi punto de vista, la suspensin o restriccin de los derechos no se
agota en el procedimiento establecido en el citado artculo 29 constitucional,
para casos de invasin, perturbacin grave de la paz pblica o de cualquier
otro que ponga a la sociedad en grave peligro o conflicto, pues ello
implicara claudicar en el ejercicio de una interpretacin integral de la
Constitucin.
Dos razones justifican entender las restricciones y suspensiones a los
derechos humanos fuera del exclusivo mbito procedimental excepcional
del artculo 29 constitucional. En primer lugar, los derechos fundamentales
no son absolutos, como lo ha reconocido la jurisprudencia de esta Suprema
Corte y la doctrina internacional; esta conclusin no se modifica con la
interpretacin del actual contenido del artculo 1 constitucional, como
tampoco se niega por la conclusin de que los derechos humanos
provenientes de distintas fuentes se relacionan por el principio de
coherencia y no de jerarqua.
En ese sentido, al ser los derechos humanos reconocidos como contenidos
tutelares o principios que deben optimarse en el mayor grado posible en
trminos
de
los
principios
de
progresividad,
universalidad,
interdependencia, indivisibilidad y propersona, ello no implica, insisto,
que sean absolutos, por lo que han de determinarse cules son los lmites
legtimos a su ejercicio.
Estas limitaciones a los derechos se individualizan en el contexto jurdico y
fctico de los asuntos en concreto, ya que se trata de normas que no
permanecen con mbitos de aplicacin abiertos, sino que estn llamados
concretarse en funcin de la maximizacin de otros derechos, principios o
reglas igualmente relevantes para cada caso concreto.
Por tanto, la determinacin de las condiciones de aplicacin de los derechos
humanos abiertas por su formulacin generalmente en forma de
principios se cierran en cada categora de casos por las exigencias de
otros principios o normas jurdicas. Reconocer que habr de estarse a las
7
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
VOTO CONCURRENTE
restricciones constitucionales no es ms que reconocer esta naturaleza
peculiar de los derechos humanos como principios.
En segundo lugar, estimo que afirmar el valor normativo de las restricciones
constitucionales es equivalente a reconocer a los derechos humanos dentro
del modelo de estado constitucional y democrtico de derecho; esto es,
afirma la existencia de los derechos humanos en el centro de una
constelacin de principios igualmente importantes para el rgimen
constitucional, como el democrtico, el de divisin de poderes, el de estado
laico, el de autodeterminacin de los pueblos indgenas, el de rgimen
social, etctera. Todos esos principios exigen maximizacin de sus
contenidos y, por tanto, tendern a coludir.
Si el artculo 1 constitucional no se entiende como una clusula que vaca
de contenido al referido modelo de estado, por tanto, creo que no puede
entenderse que el derecho internacional de los derechos humanos sea el
puerto final y definitivo de la justicia constitucional en Mxico. Las
restricciones constitucionales conforman el puente comunicador del
constitucionalismo mexicano con los derechos humanos y corresponde a la
jurisprudencia mexicana construir interpretativamente la compleja relacin
de balance entre todos los principios involucrados.
Desde mi perspectiva, esta es la concepcin con la que se debe abordar el
concepto de restricciones constitucionales. Como argumenta John Finnis1,
el desarrollo explicativo de un concepto ha de realizarse a partir de las
propiedades del caso central y no del caso marginal. El caso central cuenta
con prioridad explicativa y primaca conceptual
ante los casos
secundarios que no renen todas las propiedades principales.
En ese tenor, la restriccin constitucional de un derecho humano ha de
entenderse a partir de su caso paradigmtico en un orden constitucional
funcional como el mexicano: como contenidos resultantes de procesos
democrticos cualificados que buscan tutelar bienes constitucionales, tales
como la democracia, laicidad, economa social, federalismo, pluralismo,
divisin de poderes. Por consiguiente, las restricciones constitucionales ms
1
Vase, Natural Law and Natural Rights, Clarendon Law Series, Oxford, 1980.
8
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
VOTO CONCURRENTE
que elementos opuestos y arbitrarios que mutilan derechos humanos, deben
interpretarse, en principio, como decisiones con dignidad democrtica que
formulan bienes valiosos para la tradicin del constitucionalismo moderno,
cuyas exigencias se pueden formular por el intrprete como principios.
Afirmar la vinculatoriedad de las restricciones constitucionales es mostrar
deferencia al proceso democrtico y buscar maximizar la totalidad de los
principios del constitucionalismo moderno, en cuyo centro se ubican los
derechos humanos.
Al final, desde mi perspectiva, la cuestin de la aplicabilidad de las
restricciones
constitucionales
expresas
los
derechos
humanos
desembocar en un ejercicio de ponderacin, en el cual se habr de otorgar
deferencia al Poder Constituyente Permanente. Las restricciones no habrn
de aplicarse como reglas sujetas a subsuncin, sino como elementos
normativos que debern interpretarse de manera conforme con los
derechos humanos y, en su caso, se sujetarn al estndar de su
compatibilidad con el sistema general de derechos humanos, ya que una
abierta incompatibilidad de la restriccin podra generar su inaplicacin al
trascender en el mbito de lo indecidible (de ah que sea una ponderacin
deferencial solamente). En ese sentido, es pertinente recordar lo
establecido por la Corte Interamericana de Derechos Humanos en el Caso
Gelman vs. Uruguay:
La legitimacin democrtica de determinados hechos o actos en una sociedad est
limitada por las normas y obligaciones internacionales de proteccin de los derechos
humanos reconocidos en tratados como la Convencin Americana, de modo que la
existencia de un verdadero rgimen democrtico est determinada por sus
caractersticas tanto formales como sustanciales, por lo que, particularmente en
casos de graves violaciones a las normas del Derecho Internacional de los Derechos,
la proteccin de los derechos humanos constituye un lmite infranqueable a la regla
de mayoras, es decir, a la esfera de lo susceptible de ser decidido por parte de las
mayoras en instancias democrticas, en las cuales tambin debe primar un control
de convencionalidad [], que es funcin y tarea de cualquier autoridad pblica y no
slo del Poder Judicial. [] Otros tribunales nacionales se han referido tambin a los
lmites de la democracia en relacin con la proteccin de derechos fundamentales.2
Con base en lo anterior, claro que existirn casos perifricos que podran
calificarse como constitucionalizaciones de violaciones de derechos
humanos, para aquellos casos hipotticos en los que el Poder
Corte IDH. Caso Gelman Vs. Uruguay. Fondo y Reparaciones. Sentencia de 24 de febrero de
2011 Serie C No.221, prr. 239.
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
VOTO CONCURRENTE
Constituyente Permanente y el proceso democrtico fracasen en el intento
de lograr un adecuado balance de bienes constitucionales y produzcan una
reforma a la Constitucin para introducir un corte arbitrario a un derecho
humano. Sin embargo, estimo que se trata de un caso perifrico, cuyo
tratamiento requiere reconocer que se trata de una restriccin que carece
de las propiedades relevantes del caso central, mereciendo un estndar
distinto.
Justamente para el tratamiento de estos casos perifricos es que en las
sesiones del Tribunal Pleno manifest que mi posicin es que las
restricciones constitucionales no habran de aplicarse como reglas, sujetas
a la lgica de la subsuncin, sino que se someten a una ponderacin con
deferencia al constituyente democrtico.
Esta posicin implica que las restricciones constitucionales no se aplican en
automtico en cuanto se actualicen sus condiciones de aplicacin, como
cualquier regla bajo la lgica de una aplicacin de todo o nada sino
que se actualizan bajo el tamiz de decisiones que encierran la opcin de un
balance de distintos bienes constitucionales, por lo que han de someterse a
una metodologa de ponderacin: es decir, determinando su finalidad,
necesidad y proporcionalidad y entendiendo que ha de darse deferencia al
legislador democrtico para resolver los temas centrales de acomodo de
bienes constitucionales.
No obstante, cuando se trate de restricciones cuya ponderacin deferencial
no alcance para lograr su compatibilidad con el sistema general de los
derechos humanos, se deber analizar el caso concreto y tal vez debern
ceder valor aplicativo al derecho humano, pero, insisto, no porque se trate
de restricciones per se, sino porque se trata de limitaciones arbitrarias e
incompatibles con los derechos humanos.
Aqu es donde encuentra cabida el concepto de deferencia democrtica
a la Constitucin. Se trata de la consecucin en un paso ulterior en la
realizacin del principio de presuncin de legitimidad democrtica de las
leyes, utilizada por esta Suprema Corte como mtodo interpretativo,
ahora utilizable para otorgar deferencia al Poder Constituyente
10
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
VOTO CONCURRENTE
Permanente como depositario de la mayor legitimidad democrtica en el
sistema. El rgimen democrtico exige no sustituir la interpretacin del
constituyente por aquella del tribunal en el momento de balancear los
bienes constitucionalmente protegidos en la forma de la restriccin de un
derecho, a menos que sta sea abiertamente incompatible, bajo
cualquier luz, con el sistema general de derechos humanos.
En ese sentido, las restricciones expresas de naturaleza constitucional al
ejercicio de los derechos humanos pueden tener dos causas posibles en un
rgimen democrtico: a) ser el resultado de un ejercicio de ponderacin
propio del Constituyente de los mismos derechos humanos (las obligaciones
generadas por dichos derechos suelen entrar en conflicto) y b) ser el
resultado de un ejercicio democrtico de ponderacin entre determinados
derechos y otros bienes constitucionalmente protegidos, como el rgimen
democrtico, federalismo, divisin de poderes, etctera.
Las limitaciones de la Constitucin al ejercicio de los derechos humanos
podrn encuadrarse en algunas de estas categoras y, por tanto, se debe
otorgar deferencia al juicio del Poder Constituyente, slo derrotables en
casos lmites cuando los resultados de esas ponderaciones democrticas
sean abiertamente incoherentes con el sistema general de derechos
humanos.
MINISTRO ALFREDO GUTIRREZ ORTIZ MENA
11
VOTO CONCURRENTE QUE FORMULA LA SEORA
MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO DE GARCA
VILLEGAS EN RELACIN CON LA RESOLUCIN DE LA
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
En sesin de tres de septiembre de dos mil trece, el Pleno de la
Suprema Corte de Justicia de la Nacin, analiz y resolvi la
contradiccin de tesis 293/2011, suscitada entre los criterios emitidos
por el Primer Tribunal Colegiado en Materias Administrativa y de
Trabajo del Dcimo Primer Circuito y el Sptimo Tribunal Colegiado en
Materia Civil del Primer Circuito, en los cuales se debatieron dos
temas de la mayor trascendencia para el orden jurdico nacional y la
eficacia en la proteccin de los derechos humanos; stos consistieron
esencialmente en determinar el papel que juegan los derechos
humanos de fuente internacional respecto de la Constitucin General
de la Repblica, as como la aplicacin y en su caso el efecto
vinculante de la jurisprudencia internacional de aquellos tribunales
respecto de los cuales Mxico ha reconocido su competencia.
Despus de extensas discusiones que fueron de lo ms
enriquecedoras en la construccin del criterio del calado de la materia
de que se trata, el Pleno del Alto Tribunal decidi por unanimidad de
votos que es existente la contradiccin de tesis.
Por mayora de diez votos se estableci que debe prevalecer con
el carcter de jurisprudencia el criterio del rubro y texto siguiente:
DERECHOS
HUMANOS
CONTENIDOS
EN
LA
CONSTITUCIN Y EN LOS TRATADOS INTERNACIONALES.
CONSTITUYEN
EL
PARMETRO
DE
CONTROL
DE
RUGULARIDAD CONSTITUCIONAL, PERO CUANDO EN LA
CONSTITUCIN HAYA UNA RESTRICCIN EXPRESA AL
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
EJERCICIO DE AQUELLOS, SE DEBE ESTAR A LO QUE
ESTABLECE
EL
TEXTO
CONSTITUCIONAL.
El
primer
prrafo del artculo 1 constitucional reconoce un conjunto
de derechos humanos cuyas fuentes son la Constitucin y
los tratados internacionales de los cuales el Estado
Mexicano sea parte. De la interpretacin literal, sistemtica y
originalista del contenido de las reformas constitucionales
de seis y diez de junio de dos mil once, se desprende que
las normas de derechos humanos, independientemente de
su fuente, no se relacionan en trminos jerrquicos,
entendiendo que, derivado de la parte final del primer
prrafo del citado artculo 1, cuando en la constitucin haya
una restriccin expresa al ejercicio de los derechos
humanos, se deber estar a lo que indica la norma
constitucional, ya que el principio que le brinda supremaca
comporta el encumbramiento de la constitucin como
norma fundamental del orden jurdico mexicano, lo que a su
vez implica que el resto de las normas jurdicas deben ser
acordes con la misma, tanto en un sentido formal como
material, circunstancia que no ha cambiado; lo que s ha
evolucionado a raz de las reformas constitucionales en
comento es la configuracin del conjunto de normas
jurdicas respecto de las cuales puede predicarse dicha
supremaca
en
el
orden
jurdico
mexicano.
Esta
transformacin se explica por la ampliacin del catlogo de
derechos humanos previsto dentro de la constitucin
poltica
de
los
Estados
Unidos
Mexicanos,
el
cual
evidentemente puede calificarse como parte del conjunto
normativo que goza de esta supremaca constitucional. En
este sentido los derechos humanos, en su conjunto,
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
constituyen
el
parmetro
de
control
de
regularidad
constitucional, conforme al cual debe analizarse la validez
de las normas y actos que forman parte del orden jurdico
mexicano.
Y finalmente, por mayora de seis votos se determin el carcter
vinculante de la jurisprudencia de la Corte Interamericana, conforme al
criterio siguiente:
JURISPRUDENCIA
INTERAMERICANA
EMITIDA
DE
POR
DERECHOS
LA
CORTE
HUMANOS.
ES
VINCULANTE PARA LOS JUECES MEXICANOS SIEMPRE
QUE SEA MS FAVORABLE A LA PERSONA. Los criterios
jurisprudenciales de la Corte Interamericana de Derechos
Humanos, con independencia de que el Estado Mexicano
haya sido parte en el litigio ante dicho tribunal, resultan
vinculantes para los jueces nacionales al constituir una
extensin de la Convencin Americana sobre Derechos
Humanos, toda vez que en dichos criterios se determina el
contenido de los derechos humanos establecidos en ese
tratado.
La
interamericana
fuerza
se
vinculante
desprende
de
la
jurisprudencia
del
propio
mandato
establecido en el artculo 1 Constitucional, pues el principio
pro persona obliga a los jueces nacionales a resolver cada
caso atendiendo a la interpretacin ms favorable a la
persona, en cumplimiento de este mandato constitucional,
los operadores jurdicos deben atender a lo siguiente: i)
cuando el criterio se haya emitido en un caso en el que el
Estado Mexicano no haya sido parte, la aplicabilidad del
precedente al caso especfico debe determinarse con base
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
en la verificacin de la existencia de las mismas razones que
motivaron el pronunciamiento; ii) en todos los casos en que
sea
posible
debe
armonizarse
la
jurisprudencia
interamericana con la nacional; y iii) de ser posible la
armonizacin, debe aplicarse el criterio que resulte ms
favorecedor para la proteccin de los derechos humanos.
Respecto de la decisin del Pleno de la Alto Tribunal, si bien mi
voto fue con el proyecto del Seor Ministro Arturo Zldivar Lelo de
Larrea, con las modificaciones que se acordaron por la mayora; pues
el motivo esencial que determin mi voto fue el reconocimiento de un
bloque de derechos, que se integra tanto con los derechos humanos
que consagra la Constitucin General de la Repblica, como los que
se han establecido en los tratados internacionales. Postura que he
guardado desde hace varios aos, y da cuenta de ello el voto de
minora que suscrib en unin del Seor Ministro Don Juan Daz
Romero, en el amparo directo en revisin 537/2002, resuelto por el
Pleno en sesin de catorce de octubre de dos mil dos, en el que
sostuvimos en lo que corresponde al bloque o masa que conforman
los derechos humanos, lo siguiente:
En otro aspecto, la eventual controversia sobre la aplicacin
de la norma de derecho interno y el tratado internacional, constituye
un conflicto de leyes en el espacio que se resolvera atendiendo a los
criterios espaciales de validez de las normas jurdicas, que es otro
mtodo de clasificacin de las normas jurdicas, por virtud del cual se
atender a la esfera de aplicacin de la norma en un lugar y espacio
determinados, lo cual nada tiene que ver con su jerarqua, cuyos
elementos distintivos ya han sido analizados.
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
Adems de lo anteriormente expuesto, otro aspecto por el que la
tesis en comento no es sostenible, es porque al determinar
indiscriminadamente la supremaca de los tratados internacionales
sobre las leyes, deja de considerar que no todas las especies de ese
gnero de acuerdos multinacionales tienen idnticos contenidos
materiales, lo cual la conduce al equvoco de situar en una misma
categora tanto a los que se refieren a derechos humanos como los
que regulan aspectos comerciales, tecnolgicos (telecomunicaciones),
de cooperacin, medio ambiente, etctera, cuando no debe ser as,
pues la jerarqua del tratado internacional radica fundamental y
esencialmente en su contenido, pues slo cuando regula una materia
constitucional o elevada a este rango, puede supraordinarse a las
leyes; en esta hiptesis desarrollar o ampliar principios de la norma
fundamental que deben ser respetados por las normas de menor
rango en el orden descendente y gradual ya anunciado al principio de
este considerando, que constituye uno de los elementos distintivos de
la categorizacin jerrquica del orden jurdico mexicano.
Al tenor de esta exposicin queda de manifiesto que los
argumentos que rigen la tesis plenaria nmero P. LXXVII/99 no son
idneos para sustentarla.
Por todas las anteriores razones
este Tribunal Pleno decide
abandonar esa tesis para sustentar el criterio de que los tratados
internacionales tienen supremaca respecto de las leyes, cuando
adems de satisfacer los requisitos de forma para su validez, regulen
una materia que sea propia de la Constitucin General de la Repblica
o que se encuentre elevada a rango constitucional y no menoscaben
las garantas individuales otorgadas por la norma fundamental, sino
que
amplen
los
derechos
concedidos
por
sta;
bajo
estas
circunstancias, los principios y fundamentos que los rigen constituyen
lineamientos a seguir por las normas federales ordinarias y tambin las
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
locales que regulen o desarrollen alguna materia inherente a la del
tratado internacional. Por lo tanto, los tratados internacionales tienen
la misma jerarqua que las leyes reglamentarias de la Constitucin o
constitucionales en estricto sentido, con supremaca jerrquica
respecto de las leyes federales ordinarias y las locales, cuando
respecto de estas ltimas no se haya restringido la aplicacin del
acuerdo internacional correspondiente en el mbito estatal, en
trminos del artculo 29 de la Convencin de Viena Sobre el Derecho
de los Tratados.
Por lo tanto, bajo este esquema de categorizacin jerrquica:
CONSTITUCIN LEYES CONSTITUCIONALES Y TRATADOS
INTERNACIONALES
CONTENIDO
QUE
REGULEN
CONSTITUCIONAL
UNA
LEYES
MATERIA
DE
FEDERALES
ORDINARIAS Y LOCALES, Y, TRATADOS INTERNACIONALES
CUYA
MATERIA
SEA
DE
CONTENIDO
ORDINARIO
(NO
CONSTITUCIONAL), esta ltimas leyes deben respetar los principios
del tratado internacional y si lo contradicen, ello implica una violacin
directa al artculo 133 constitucional, lo que constituye, esencialmente,
un problema de constitucionalidad susceptible de plantearse y ser
analizado por este Alto Tribunal.
En ese sentido, que en la contradiccin de tesis 293/2011, el
Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nacin, determinara por
mayora de votos que los derechos humanos conforman un bloque
especial, que se integra por lo que la Norma Fundamental establece,
como los tratados y convenciones internacionales de los que Mxico
forma parte, es acorde con la postura que desde hace varios ao he
mantenido y que desde mi personal punto de vista, es esencial para el
reconocimiento, respeto, proteccin y tutela de los derechos humanos,
con la mayor plenitud.
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
No obstante ello; guardo ciertas divergencias en relacin a los
alcances de las jurisprudencias que se han aprobado y con el
contenido del engrose, que son las que motivan el presente voto
concurrente, mismas que expondr a continuacin.
En primer trmino, comparto parcialmente el sentido de la
resolucin y las consideraciones que integran el estudio respecto de
los precedentes de este Alto Tribunal en cuanto a la jerarqua de los
tratados internacionales, a travs de los cuales se ha conformado toda
una doctrina; sin embargo, me parece que en dicho estudio descriptivo
y cronolgico se omite sealar un asunto de lo ms relevante en el
tema, y que adems representa uno de los ltimos sobre tal cuestin.
Me refiero a la solicitud de modificacin de la jurisprudencia
22/2011, resuelta por el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la
Nacin el veinticinco de octubre de dos mil once; la cual fue solicitada
por el Ministro Presidente Don Juan Silva Meza, con motivo de una de
las determinaciones que se tom en el cuaderno de varios 912/2010,
respecto de la necesidad de modificar los criterios relativos al control
concentrado
de
la
constitucin,
contenidos
en
las
tesis
de
jurisprudencia P/J.73/99 y P/J.74/99, que haban venido imperando
hasta antes de la reforma constitucional de junio de dos mil once.
En el referido asunto, esta Suprema Corte de Justicia de la
Nacin, estim que las tesis de jurisprudencia relativas al control
concentrado de la constitucin han perdido su asidero constitucional
ya que los mandatos constitucionales contenidos en los prrafos
segundo y tercero del artculo 1 de la Norma Fundamental dan lugar a
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
concluir, atendiendo al principio de supremaca constitucional derivado
de lo previsto en los artculos 15; 29, prrafo ltimo; 40; 41, prrafo
primero y 133 de la Constitucin Poltica de los Estados Unidos
Mexicanos, que los jueces del Estado Mexicano al conocer de los
asuntos de su competencia deben hacer prevalecer los derechos
humanos reconocidos en esa Norma Fundamental y en los tratados
internacionales de los que el Estado Mexicano sea parte, a pesar de
las
disposiciones
en
contrario
que
puedan
preverse
en
los
ordenamientos que les corresponda aplicar para resolver los asuntos
de su competencia.
En ese sentido, si bien se determin que no proceda la
sustitucin de jurisprudencia, se concluy que las referidas tesis
P/J.73/99 y P/J.74/99, han dejado de tener vigencia.
Al respecto, se emiti la tesis siguiente:
CONTROL DIFUSO. Con motivo de la entrada en vigor de los
prrafos segundo y tercero del artculo 1o. constitucional
modificados mediante Decreto publicado en el Diario Oficial
de la Federacin el diez de junio de dos mil once, debe
estimarse que han quedado sin efectos las tesis
jurisprudenciales P./J. 73/99 y P./J. 74/99, de rubros:
"CONTROL JUDICIAL DE LA CONSTITUCIN. ES
ATRIBUCIN EXCLUSIVA DEL PODER JUDICIAL DE LA
FEDERACIN."
y
"CONTROL
DIFUSO
DE
LA
CONSTITUCIONALIDAD DE NORMAS GENERALES. NO LO
AUTORIZA EL ARTCULO 133 DE LA CONSTITUCIN."
Solicitud de modificacin de jurisprudencia 22/2011. Ministro Presidente de
la Suprema Corte de Justicia de la Nacin. 25 de octubre de 2011. Mayora
de nueve votos; votaron en contra y por la modificacin de las tesis
jurisprudenciales respectivas: Sergio A. Valls Hernndez y Olga Snchez
Cordero de Garca Villegas. Ponente: Olga Snchez Cordero de Garca
Villegas. Secretarios: Ignacio Valds Barreiro, Jorge Roberto Ordez
Escobar y Rafael Coello Cetina.
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
El motivo de estimar que en el caso debe considerarse el
precedente antes citado atiende a que las consideraciones parten de
una interpretacin sistemtica de los artculos 1 y 133 de la
Constitucin General de la Repblica, que conlleva de algn modo el
tema relativo a la jerarqua normativa, y que es precisamente un
criterio clave en la evolucin de paradigma actual en materia de
derechos
humanos
su
proteccin
travs
de
las
vas
jurisdiccionales.
Con independencia de lo anterior, la argumentacin en la cuestin
propiamente de fondo, relativa a si existe una jerarqua entre las
normas de derechos humanos tanto de fuente nacional como de
fuente internacional, la sentencia me genera serias dudas en cuanto
que sostiene que los tratados internacionales y la constitucin no se
relacionan entre s en trminos jerrquicos; para despus de un
anlisis acucioso y acertado sobre la supremaca constitucional, la
proteccin a los derechos humanos de las personas y el principio pro
persona, concluir que con motivo de la reforma en materia de
derechos humanos, los contenidos en tratados internacionales se han
integrado expresamente a nuestro ordenamiento jurdico interno, para
ampliar el catlogo constitucional de derechos humanos, enfatizando
que ello en el entendido de que, derivado del primer prrafo del
propio artculo 1 constitucional, cuando en la Constitucin haya
una restriccin expresa al ejercicio de los derechos humanos, se
deber estar a lo que indica la norma constitucional.
Sobre esta ltima cuestin, relativa a las restricciones en materia
de derechos humanos, si bien estoy de acuerdo en que los derechos
humanos no son absolutos o irrestrictos, puesto que su ejercicio tiene
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
lmites, ya sea internos o externos por su propia posicin en el
sistema, y para la viabilidad del ejercicio de los dems derechos
humanos, que permita su sano desarrollo entre todas las personas,
sobre la aparente limitacin a los tratados internacionales tengo un
particular punto de vista, y que es precisamente el que pretendo
exponer en el presente voto concurrente.
En torno al tpico de que los derechos humanos de fuente
internacional y los establecidos en la constitucin no guardan una
relacin de jerarqua, me parece conveniente acudir a la doctrina,
especialmente del jurista alemn Adolf Merkl, quien originariamente
analizara la jerarqua de las fuentes del derecho, en su obra titulada
Prolegmenos a Una Teora de la Estructura Jurdica Escalonada del
Ordenamiento [y posteriormente desarrollada por Hans Kelsen], en la
que sostiene lo siguiente:
-Para anticipar el resultado de esta tarea de ordenacin sobre
la serie de formas jurdicas, habra que sealar que ese resultado ya
aparece en el ttulo del estudio, el cual muestra a esta serie como una
jerarqua
determinadas
una
estructura
determinantes
escalonada
(por
esas
de
formas
jurdicas
relaciones
lgicas),
supraordenadas o subordinadas. As, la serie de formas jurdicas, por
un lado, se presenta ampliada cuando se compara con la tradicional
teora de las fuentes del derecho, y en concreto aumentada en
algunos de los descuidados eslabones intermedios. Por otro lado, esa
serie, a diferencia del cuadro jurdico, en cierta medida unidimensional,
al que estbamos acostumbrados, se presenta, de nuevo hablando de
forma metafrica, como un edificio ordenado en muchas plantas (ya
tenga ms o menos). La construccin de las formas de jurdicas
propias del ordenamiento jurdico estatal vara de Estado a Estado. A
10
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
pesar de todas las diferencias nicamente corresponde a cada
concreto grupo de Estados una estructura tpica, en su planta y
alzado, del edificio jurdico, y ello porque el medio jurdico de
clasificacin de los grupos de Estados es sin duda la diferente tcnica
del edificio jurdico. Esta construccin, que se va a esbozar a
continuacin,
es
vlida
para
el
Estado
con
instituciones
parlamentarias. Al mismo tiempo, con ello se excluye de las siguientes
observaciones las formas jurdicas de derecho internacional. Desde
luego, no debe ser expuesta la realidad emprica, sino la esencia de la
estructura jurdica, y para ello la abundancia del material es
irrelevante.1
Bajo ese contexto, me resulta un tanto inexacto que se
establezca lisa y llanamente que no exista una relacin de jerarqua
entre los derechos humanos de fuente internacional y la constitucin, y
a la vez, se sostenga que al existir una restriccin se deba estar a lo
que establece la constitucin, puesto que esta ltima cuestin implica
de suyo una relacin de subordinacin normativa.
Lo anterior, no significa que mi posicin sea en contra de la
determinacin del Pleno y respecto de la cual vot con la mayora,
sino que ms bien me manifiesto por una argumentacin diversa.
Es verdad como lo sostiene la resolucin en comento que el
artculo 1 de la Constitucin General de la Repblica establece que:
En los Estados Unidos Mexicanos todas las personas gozarn de los
derechos humanos reconocidos en esta Constitucin y en los tratados
internacionales de los que el Estado Mexicano sea parte, as como de
1
Merkl, Adlofo. PROLEGMENOS A UNA TEORA DE LA ESTRUCTURA JURDICA ESCALONADA
DEL ORDENAMIENTO, Traduccin del alemn por Juan L. Fuentes Osorio y Miguel Azpitarte Snchez, en
Revista de Derecho Constitucional Europeo, n 2, julio-diciembre de 2004, 235-259.
11
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
las garantas para su proteccin, cuyo ejercicio no podr
restringirse ni suspenderse, salvo en los casos y bajo las
condiciones que esta Constitucin establece.
Sin embargo, en mi ptica la parte in fine del referido prrafo
primero del artculo 1 de la Constitucin General de la Repblica, no
conlleva una interpretacin restrictiva del alcance de los derechos
humanos de fuente internacional; es decir, estimo que la lectura del
mismo no puede ser en el sentido de que son los limites de la
Constitucin los que priman en el ejercicio de los derechos de modo
general.
Por el contrario, como lo he sostenido anteriormente ante la
reforma en materia de derechos humanos de junio de dos mil once,
estamos en presencia de un pluralismo constitucional y que en su
aplicacin debe procurarse primeramente su armonizacin y de no ser
posible, su ponderacin en el caso concreto en relacin a la aplicacin
del lmite as como el alcance de los derechos en colisin.
El prrafo primero del primer precepto de nuestra Norma
Fundamental establece que:
En los Estados Unidos Mexicanos todas las personas gozarn
de los derechos humanos reconocidos en esta Constitucin y en los
tratados internacionales de los que el Estado Mexicano sea parte, as
como de las garantas para su proteccin, cuyo ejercicio no podr
restringirse ni suspenderse, salvo en los casos y bajo las condiciones
que esta Constitucin establece.
12
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
Como lo coment en las sesiones en las que se discuti la
materia de la presente contradiccin de tesis, advierto claramente que
dicha
norma
constitucional
SUSPENSIN
de
los
refiere
Derechos
RESTRICCIN
Humanos,
que
han
Y/O
sido
RECONOCIDOS por la propia constitucin y en los Tratados
Internacionales.
As, en primer trmino, me parece que se debe partir, de la
nueva concepcin de la Norma Fundamental, en cuanto a que, a partir
de junio de dos mil once, RECONOCE LOS DERECHOS HUMANOS,
a diferencia del texto anterior, que estableca que eran OTORGADOS.
Esta es una cuestin que para m es de suma importancia, en virtud
de que el simple trmino nos remite a un modelo diverso de
interpretacin de los Derechos Humanos.
Creo que el reconocimiento de los Derechos Humanos, no puede
tener los mismos efectos que su otorgamiento; y de ah que estimo
que tratndose de restriccin o suspensin de derechos humanos,
como se prev en el artculo 29 de la Constitucin General de la
Repblica, o de los limites propios de cada derecho, ya sean de
naturaleza interna o externa por su propia posicin en el sistema, su
aplicacin y eventual colisin con otros derechos, considero que
deben
ser
ms
laxos,
sujetarse
su
armonizacin,
complementariedad, dando un margen de accin a las restricciones y
suspensin de los Derechos Humanos, as como a sus lmites,
atendiendo a lo ms favorable a la persona, y a los principios que la
propia Constitucin prev, como lo son:
la universalidad, la
interdependencia, la indivisibilidad y progresividad.
13
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
Partiendo de la premisa de que, inicialmente la Constitucin
establece el goce de los derechos humanos reconocidos en la misma
constitucin y los tratados internacionales, y del principio pro persona,
considero que la restriccin o suspensin de los mismos, no implica
una subordinacin de los derechos fundamentales de fuente
internacional, o que lleve a supeditarlos; sino ms bien implica una
remisin al artculo 29 de la propia Constitucin General de la
Repblica, que refiere principalmente a supuestos excepcionales,
siendo una norma de emergencia o estado de excepcin, cuyo fin es
la preservacin misma del Estado; y no el de establecer un parmetro
limitativo de los Derechos Humanos de modo general a los topes que
establezca la propia constitucin; pues parto esencialmente del
establecimiento expreso del principio pro persona, y su efecto til,
tanto en su manifestacin en el artculo 1 de la Constitucin, como de
su origen en diversos tratados internacionales.
El numeral 29, refiere a que en los casos de invasin,
perturbacin grave de la paz pblica, o de cualquier otro que ponga a
la sociedad en grave peligro o conflicto, solamente el Presidente de los
Estados Unidos Mexicanos, de acuerdo con los titulares de las
Secretaras de Estado y la Procuradura General de la Repblica y con
la aprobacin del Congreso de la Unin o de la Comisin Permanente,
cuando aquel no estuviere reunido, PODR RESTRINGIR O
SUSPENDER en todo el pas o en lugar determinado el ejercicio de
los derechos y las garantas que fuesen obstculo para hacer frente,
rpida y fcilmente a la situacin; pero deber hacerlo por un tiempo
limitado, por medio de prevenciones generales y sin que la restriccin
o suspensin se contraiga a determinada persona.
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CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
El propio artculo 29, en su prrafo segundo, establece el ncleo
duro de derechos o el contenido inderogable, en cuanto a que los
decretos
que
se
expidan,
NO
PODRN
RESTRINGIR
NI
SUSPENDER el ejercicio de los derechos a la no discriminacin, al
reconocimiento de la personalidad jurdica, a la vida, a la integridad
personal, a la proteccin a la familia, al nombre, a la nacionalidad; los
derechos de la niez; los derechos polticos; las libertades de
pensamiento, conciencia y de profesar creencia religiosa alguna; el
principio de legalidad y retroactividad; la prohibicin de la pena de
muerte; la prohibicin de la esclavitud y la servidumbre; la prohibicin
de la desaparicin forzada y la tortura; ni las garantas judiciales
indispensables para la proteccin de tales derechos.
En el caso de darse tales restricciones o suspensin del ejercicio
de los derechos y garantas deber estar fundada y motivada en los
trminos establecidos por esta Constitucin y ser proporcional al
peligro a que se hace frente, observando en todo momento los
principios de legalidad, racionalidad, proclamacin, publicidad y no
discriminacin.
La trascendencia de tales decretos de restriccin o suspensin,
POR SU NATURALEZA EXCEPCIONAL se pone de manifiesto en la
disposicin constitucional en cuanto a que sern revisados de oficio e
inmediatamente por la Suprema Corte de Justicia de la Nacin, la que
deber
pronunciarse
con
la
mayor
prontitud
sobre
su
constitucionalidad y validez.
Esta disposicin Constitucional, que adems, es similar en un
gran nmero de pases, busca la preservacin del sistema
democrtico, dotando para ello a los Poderes del Estado de tales
15
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
Facultades, ante graves circunstancias que puedan amenazar la
estabilidad de las instituciones y la paz interior; lo que es
indispensable precisamente para la ms operativa y optima proteccin
de los derechos humanos.
La propia Convencin Americana Sobre Derechos Humanos,
distingue restriccin y suspensin de los derechos.
De sus artculos 29 y 30, se desprende que la restriccin de los
Derechos es en relacin a SU NORMAL EJERCICIO bajo una base
razonable; por su parte, el artculo 27 del referido Pacto de San Jos,
prev la suspensin como una cuestin de naturaleza excepcional,
que pongan el peligro el Estado o el sistema de gobierno por
circunstancias objetivamente graves, al punto de que no puedan ser
superadas por los medios ordinarios de regulacin de conflictos.
Del mismo modo el Pacto de Derechos Civiles y Polticos, en su
numeral 4, prev la suspensin excepcional de los Derechos.
Bajo tal idea, me parece que los conceptos que emplea el
artculo 1, de la Constitucin General de la Repblica, en la parte final
del primer prrafo, consistentes en la restriccin o suspensin de los
Derechos Humanos, no se identifica con los lmites que cada derecho
en particular podr tener, pues ello es motivo del caso particular en el
que se encuentren en conflicto y la colisin que pueda surgir entre
ellos en su ejercicio y no como una cuestin general, impersonal y
abstracta de la norma de emergencia creada a travs de un decreto;
siendo en el caso de colisin de derechos resuelto por los medios
ordinarios ante la autoridad jurisdiccional valorando las condiciones
16
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
especficas, aplicando el mtodo que en su arbitrio judicial considere,
sea ponderacin, razonabilidad, proporcionalidad en sentido estricto.
Los limites, a diferencia de lo que implica la restriccin o la
suspensin de los Derechos Humanos, pueden ser variantes internas
o externas, siendo internas aquellas que expresamente prev el
mismo precepto, y externas en relacin con los dems derechos y su
ejercicio, como lo ha sostenido en diversas ocasiones este Alto
Tribunal.
Sobre esta cuestin es ilustrativa la tesis aislada de la Primera
Sala de rubro: DERECHO A LA VIDA PRIVADA. SU CONTENIDO ES
VARIABLE TANTO EN SU DIMENSIN INTERNA COMO EXTERNA.
En lo que se refiere a la extensin y contenido de los derechos
humanos, en su valoracin por el aplicador nacional, a partir de un
modelo de solucin de colisin de derechos, como puede ser el juicio
de ponderacin, el anlisis de proporcionalidad en sentido estricto o de
razonabilidad, y primordialmente el principio pro persona, conlleva lo
que la doctrina de los Tribunales Internacionales ha denominado el
margen de apreciacin nacional; pues la integracin de los Derechos
Humanos de fuente internacional no implica de manera automtica su
primaca frente a los de fuente nacional o su aplicacin irrestricta, pues
precisamente la autoridad nacional cuenta con un margen de accin
para determinar el caso particular.
El margen de apreciacin nacional, como doctrina ampliamente
utilizada por varios tribunales internacionales, se traduce en una
suerte de deferencia hacia las autoridades nacionales para que sean
stas las que decidan sobre una determinada cuestin. La aplicacin
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CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
de esta doctrina al mbito de los DERECHOS HUMANOS ha supuesto
la concesin de cierto margen de actuacin a las autoridades
nacionales, que seran las encargadas de resolver determinadas
vulneraciones de derechos humanos en aquellos casos en los que el
tribunal internacional correspondiente considera que los rganos
internos estn mejor posicionados e informados que el propio rgano
internacional para resolver la cuestin litigiosa.
As, el mtodo que el aplicador jurdico considere en el caso
sometido a su conocimiento, deber ser analizado en combinacin con
el llamado margen de apreciacin, o tambin denominado margen de
discrecionalidad del cual disponen los Estados parte, que permite la
injerencia de conceptos arraigados en la historia, cultura jurdica o
realidad econmica y social, entre otros.
Los lmites que cada derecho humano en particular exige, ya sea
en los provenientes de fuente nacional, o de fuente internacional,
forman parte del contenido mismo de los derechos, de su extensin,
es precisamente ah, donde juega un papel preponderante el principio
pro persona.
Pues referir a lmites, forzosamente implica la extensin y
alcance de los derechos, impidiendo apreciar o considerar lo que en
esencia sea lo verdadera y efectivamente ms favorable a la persona
en derecho.
As, al integrarse un derecho de fuente internacional, creo que
corresponde al aplicador la interpretacin y aplicacin del derecho,
considerando el principio pro persona, que importa tener en cuenta la
regla que est orientada a privilegiar, preferir, seleccionar, favorecer,
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CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
tutela y adoptar la aplicacin de la norma que ms proteja a la
persona; el cual se contiene en el prrafo segundo del artculo 1 de la
Constitucin, y que tiene su origen precisamente en el derecho
internacional de los derechos humanos.
Este principio tiene su origen en el artculo 31, de la Convencin
de Viena, que prev que la interpretacin de las normas contenidas en
un tratado internacional se debe tener en cuenta el objeto y fin; de
donde debe tenerse presente que tratndose de los Derechos
Humanos, estos consisten en conferir derechos a los individuos frente
al Estado y no regular las relaciones entre los propios Estados.
En sentido similar se refieren el Pacto Internacional de Derechos
Civiles y Polticos de 1966, en su artculo 5; la Convencin sobre la
Eliminacin de Todas las Formas de Discriminacin contra la Mujer, de
1979, en su artculo 23; la Convencin sobre los Derechos del Nio en
su numeral 41; y la Convencin Americana sobre Derechos Humanos
en su artculo 29; entre otros instrumentos.
De los cuales se desprende que el principio pro persona es
inspirador del derecho internacional de los derechos humanos y
representa una fundamental e indispensable regla interpretativa al
momento de la aplicacin de los tratados internacionales de los
derechos humanos por los tribunales nacionales.
El principio pro persona se basa en que los derechos inherentes
a la persona reconocidos jurdicamente como universales, deben ser
protegidos frente actos ilegtimos del Estado, sea por las instituciones,
agentes, empleados, funcionarios o servidores pblicos, que toleran la
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CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
impunidad. En similares condiciones operan los principios favor
debitoris, in dubio pro reo, o indubio pro operario.
Y es que, considero que la aplicacin y operacin del Principio
Pro persona, se manifiesta a travs de tres reglas, 1) la conservacin
de la norma ms protectora; 2) la aplicacin de la norma ms favorable
y 3) la interpretacin con el sentido ms protector.
En primer lugar, la conservacin de la norma ms favorable,
significa que la norma posterior no derogara o llevara a desaplicar
otra anterior, con independencia de su jerarqua, en tanto que la
anterior consagre mejor o mayor proteccin para la persona, que debe
conservarse. Esto se encuentra contenido el Pacto Internacional de
Derechos Civiles y Polticos, el conjunto de Principios para la
Proteccin de Todas las Personas Sometidas a Cualquier Forma de
Detencin o Prisin, la Declaracin sobre la Proteccin de Todas las
Personas Contra las Desapariciones Forzadas, la Convencin
Americana sobre Derechos Humanos, la Convencin Interamericana
para la Eliminacin de Todas las Formas de Discriminacin contra las
Personas con Discapacidad, entre otras.
La segunda forma en que se manifiesta el Principio pro Persona,
es a travs de su aplicacin, cuando a una situacin concreta le es
aplicable a dos o ms normas vigentes, nacionales o internacionales;
el aplicador jurdico debe seleccionar entre las normas que concurren,
eligiendo aquella que contenga mayor proteccin o la ms favorable
para la persona en relacin con sus derechos humanos. Lo que
significa que la tradicional regla de la jerarqua, cedera frente a la
conveniencia de otra norma, aun de una jerarqua inferior, en caso que
mejor proteja al ser humano.
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CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
A travs de la aplicacin de la norma ms protectora, es
imposible plantearse un problema de ilegalidad al aplicar una norma
inferior, toda vez que es la misma norma de rango superior, ya sea la
constitucin o el tratado internacional, los que expresamente permiten
la aplicacin de aquella otra norma, toda vez que su materia implica
una mayor proteccin.
Finalmente, la operatividad del Principio pro persona en sentido
interpretativo de tutela, significa el sentido en el cual el juzgador frente
a la norma de derechos humanos que pudiera tener varias
interpretaciones posibles aplicar la que conlleve la mayor proteccin
a la persona; en el caso, no se trata de dos reglas que estn en
conflicto, bajo una concurrencia de normas; sino el significado y
alcance que se le adscriba a la misma norma brindando la mayor y
mejor tutela a la persona.
As, desde mi punto de vista, considero que el artculo 1, en la
parte final de su primer prrafo, es una remisin a las normas de
emergencia que el numeral 29 establece, una previsin general de la
extensin del RECONOCIMIENTO que hace el propio numeral,
extensin que puede implicar su suspensin o restriccin de manera
excepcional y con requisitos formales que implican su control y
motivacin reforzada.
En mi concepto, como lo he sealado se crea un pluralismo
constitucional, pues se forma un bloque de derechos a partir de lo
expresamente previsto en la norma fundamental, como en aquellos
tratados internacionales de los que Mxico es parte, formando un
cmulo de derechos sujetos a su armonizacin. Ejercicio que en su
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CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
integracin en la reforma de junio de dos mil once ya fue valorada y
aceptada por el constituyente permanente.
Aunado a las anteriores ideas, estimo que precisamente, de
manera conjunta en la Reforma publicada el diez de junio de dos mil
once, se reformaron diversos artculos, entre ellos el artculo 1 y el 29;
y si no fue modificado el artculo 133, fue por que el Constituyente
Permanente estim que no era necesario, pues la integracin de los
Derechos Humanos contenidos en tratados internacionales, parte del
artculo 1; siendo vigente la jerarqua del 133, en aquellas normas
contenidas en tratados internacionales, cuya naturaleza NO SEA LA
DE UN DERECHO HUMANO, como pueden ser los relativos a
cooperacin
internacional
en
meras
cuestiones
orgnicas,
bilaterales, o multilaterales de naturaleza comercial entre los Estados.
Por tales razones, mi posicin en torno al carcter de los
Derechos Humanos provenientes de fuente internacional es en el
sentido de un bloque de derechos o pluralismo constitucional, sin
compartir que los lmites contenidos en la constitucin para los
Derechos
Humanos,
trasciendan
limiten
los
de
fuente
internacional.
En segundo lugar, por lo que respecta a la segunda tesis que
sostiene el engrose, relativa a la jurisprudencia de la Corte
Interamericana de Derechos Humanos; celebro el cambio de criterio
en relacin con lo que en su momento se sostuvo en el cuaderno de
varios 912/2011, en el que se haba determinado que nicamente eran
vinculantes las consideraciones de aquellos asuntos en los que el
Estado Mexicano fuera parte, y la relativa a los dems estados
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CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
sometidos a la jurisdiccin del referido Tribunal Interamericano de
Derechos Humanos, nicamente tenan carcter orientador.
A partir de la determinacin tomada por mayora de seis votos en
la contradiccin de tesis 293/2011, se sostiene que toda la
jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos
derivada de los casos litigiosos es vinculante para Mxico.
No obstante ello, es solamente acertado parcialmente.
La Corte Interamericana de Derechos Humanos, no es el nico
tribunal internacional en materia de derechos humanos al que Mxico
ha reconocido jurisdiccin, esta es solamente la corte del sistema
interamericano de derechos humanos, propia de la Organizacin de
Estados Americanos; pero Mxico tambin ha reconocido la
competencia del sistema universal de derechos humanos, propio de la
Organizacin de las Naciones Unidas, y del cual se ha aceptado la
jurisdiccin del Tribunal Internacional de Justicia, que entre otros
criterios relevantes se ha pronunciado en el famoso caso Avena,
promovido precisamente por Mxico.
En ese orden de ideas considero que el criterio relativo a la
jurisprudencia internacional con carcter vinculante para Mxico, no
debera de ser entendido de modo limitativo a la proveniente de la
Corte Interamericana de Derechos Humanos, sino tambin incluir
aquella del Tribunal Internacional de Justicia.
Asimismo, tampoco comparto que nicamente sea jurisprudencia
vinculante aquella interpretacin derivada de los casos litigiosos, pues
lo cierto es que la Corte Interamericana no slo realiza la
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CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
interpretacin directa de los cuerpos internacionales de derechos
humanos en conflictos litigiosos de los estados parte, sino que tambin
la realiza en aquellas opiniones consultivas que le son elevadas por
los mismos estados que forman parte.
Un supuesto de la mayor importancia para Mxico, es la OC16/99, que nuestro pas elev con motivo del derecho a la asistencia
consular.
En ese sentido, al realizar la Corte Interamericana una
interpretacin directa de la Convencin Americana sobre Derechos
Humanos y los dems cuerpos normativos propios del sistema
interamericano, no slo en los casos contenciosos sino tambin en las
opiniones consultivas, stas deben ser consideradas igualmente
jurisprudencia vinculante para Mxico, con independencia del estado
que la hubiera solicitado.
Sobre el carcter de la interpretacin que realiza la Corte
Interamericana de Derechos Humanos, la misma se ha pronunciado
en los casos en los que ha establecido la responsabilidad del Estado
Mexicano,
As la Corte Interamericana de Derechos Humanos, en el Caso
Radilla Pacheco Vs. Estados Unidos Mexicanos, de noviembre de dos
mil nueve, en su prrafo 339, estableci lo siguiente:
339. En relacin con las prcticas judiciales, este Tribunal
ha establecido en su jurisprudencia que es consciente de que los
jueces y tribunales internos estn sujetos al imperio de la ley y,
por ello, estn obligados a aplicar las disposiciones vigentes en
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CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
el ordenamiento jurdico. Pero cuando un Estado ha ratificado un
tratado internacional como la Convencin Americana, sus jueces,
como parte del aparato del Estado, tambin estn sometidos a
ella, lo que les obliga a velar porque los efectos de las
disposiciones de la Convencin no se vean mermados por la
aplicacin de leyes contrarias a su objeto y fin, que desde un
inicio carecen de efectos jurdicos.
En otras palabras, el Poder Judicial debe ejercer un control
de convencionalidad ex officio entre las normas internas y la
Convencin Americana, evidentemente en el marco de sus
respectivas competencias y de las regulaciones procesales
correspondientes. En esta tarea, el Poder Judicial debe tener en
cuenta no solamente el tratado, sino tambin la interpretacin que
del mismo ha hecho la Corte Interamericana, intrprete ltima de
la Convencin Americana.
En ese sentido, en el control de convencionalidad que realizan
los Estados Partes, no slo se tomar en cuenta las normas de los
textos
internacionales
suscritos
por
ellos,
sino
tambin
la
interpretacin que realiza la propia Corte Interamericana, que es
precisamente un parmetro para la conformacin de un ius comune
interamericano y el efecto til del mismo.
Como corolario a las razones que he expuesto, estimo que los
operadores jurdicos, en la aplicacin de los criterios emitidos con
motivo de la contradiccin de tesis 293/2011, deben realizar un
anlisis previo de los derechos en conflicto, tanto en su extensin,
como en relacin con sus lmites en el caso concreto y realizar un
ejercicio de armonizacin y/o ponderacin para efecto de su
aplicabilidad; esto es, que el criterio relativo a los limites y restricciones
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CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011.
VOTO CONCURRENTE DE LA SEORA MINISTRA OLGA SNCHEZ CORDERO.
de los derechos humanos contenidos en la constitucin no es de
aplicacin lisa y llana, sino que requiere de un anlisis detallado y
valoracin del caso particular.
Por otro lado, considero que tratndose de precedentes de
tribunales internacionales en materia de derechos humanos, de los
cuales Mxico ha aceptado su competencia, la lectura de la tesis
relativa a la jurisprudencia internacional debe ser en sentido amplio y
no restrictivo; esto es, sin que sea limitativo a los emitidos por la Corte
Interamericana de Derechos Humanos; y no slo a la interpretacin y
consideraciones que tal tribunal interamericano desarrolla en los casos
litigiosos o contenciosos, sino tambin las razones que derivan de las
opiniones consultivas.
Por los anteriores motivos aun cuando comparto el sentido y la
mayora de las consideraciones, he querido realizar algunas
precisiones en torno a mi voto.
Mxico, Distrito Federal a siete de abril de dos mil catorce.
MINISTRA.
OLGA SNCHEZ CORDERO DE GARCA VILLEGAS.
IVB.
26
VOTO
CONCURRENTE
QUE
FORMULA
EL
MINISTRO
JORGE MARIO PARDO REBOLLEDO, EN LA CONTRADICCIN DE
TESIS 293/2011.
En sesin de tres de septiembre de dos mil trece, el Tribunal
Pleno resolvi el asunto citado al rubro. En relacin con el punto
resolutivo segundo, compart el criterio mayoritario y emit voto a favor,
con la reserva de realizar voto concurrente. Por lo tanto, a
continuacin me permitir exponer las razones de mi postura y
respetuosamente me apartar de ciertas consideraciones de la
sentencia aprobada.
No as en relacin con la segunda parte del proyecto relativa al
punto resolutivo en comento, donde emit voto en contra de la
determinacin adoptada por mayora de seis votos, consistente en que
la jurisprudencia emitida por la Corte Interamericana de Derechos
Humanos, es vinculante para los jueces mexicanos siempre que sea
ms favorable a la persona.
I.
Razones de la sentencia. La primera parte del proyecto
aprobado sostiene que los derechos humanos no se relacionan entre
s en trminos jerrquicos, pues ahora constituyen un solo parmetro
de regularidad constitucional, cuyo contenido tiene la finalidad de
proteger de la manera ms favorable al titular de un derecho. As, la
sentencia afirma que los derechos reconocidos en la Constitucin son
mnimos de proteccin frente al Estado y en esa medida, alguna
norma que pueda complementarla o que pueda ampliar esa
proteccin, no puede resultar contraria a la propia Constitucin,
toda
vez
que
constitucional.
integran
el
mismo
parmetro
de
regularidad
VOTO CONCURRENTE EN LA
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
En la segunda parte, se concluye que cada pronunciamiento de
la Corte Interamericana de Derechos Humanos integra la doctrina
jurisprudencial
interamericana,
cuya
fuerza
vinculante
debe
entenderse en clave de progresividad, es decir, como un estndar
mnimo que debe ser recibido por los Estados que hayan reconocido
su competencia contenciosa para ser aplicados directamente, en
forma armnica con la jurisprudencia nacional.
Por lo tanto, la fuerza vinculante de los criterios interpretativos
contenidos en las sentencias interamericanas debe extenderse a
aqullas dictadas en casos en los que el Estado mexicano no haya
sido parte. En consecuencia, se determina que los criterios que emita
la Corte Interamericana, como intrprete ltimo de la Convencin
Americana de Derechos Humanos en el mbito internacional, son
vinculantes para todos los rganos jurisdiccionales del pas, cuando
resulte ms favorable, como lo ordena el principio pro persona.
Lo anterior sin que se pretenda desconocer ni sustituir la
jurisprudencia nacional, pues la aplicacin de la jurisprudencia del
Tribunal Interamericano debe hacerse en clave de colaboracin y no
de contradiccin con la jurisprudencia nacional. En todo caso, se
afirma que lo importante ser que la inaplicacin de un criterio
jurisprudencial, nacional o interamericano, se justifique atendiendo a la
aplicacin de otro que resulte ms favorecedor de la persona.
II.
Cuestin previa al voto concurrente. Como precis en
un principio, form parte de la minora en contra de la segunda parte
del proyecto aprobado. Por lo tanto, me permito realizar ciertas
precisiones al respecto, ya que si bien no constituyen materia del
VOTO CONCURRENTE EN LA
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
presente voto concurrente, las estimo necesarias para exponer mi
postura integral respecto del tema en estudio.
El voto que emit en contra de la segunda parte de la sentencia,
atiende fundamentalmente a la opinin que ya he planteado con
motivo del expediente Varios 912/2010. De conformidad con lo
puntualizado en dicho precedente, considero que aun tras la reforma
constitucional en materia de derechos humanos, los criterios de la
Corte Interamericana debern ser obligatorios para Estados que
figuren como parte en los litigios concretos, mientras que la
jurisprudencia resultante de sus dems resoluciones ser orientadora
para las decisiones que deben adoptarse en el orden jurdico interno
por el Estado mexicano sobre violaciones a derechos fundamentales.
Esto obedece a la inclusin expresa que se hace en el artculo 1
constitucional, de los tratados internacionales en el mbito de
proteccin de derechos humanos.
Lo anterior fue plasmado en los prrafos 20 y 21 del expediente
Varios 912/2010, que a continuacin se transcriben:
20. Por otro lado, el resto de la jurisprudencia de la Corte
Interamericana que deriva de las sentencias en donde el Estado
mexicano no figura como parte, tendr el carcter de criterio
orientador de todas las decisiones de los jueces mexicanos, pero
siempre en aquello que le sea ms favorecedor a la persona, de
conformidad con el artculo 1 constitucional cuya reforma se public
en el Diario Oficial de la Federacin el diez de junio de dos mil once,
en particular en su prrafo segundo, donde establece que: Las
normas relativas a los derechos humanos se interpretarn de
conformidad con esta Constitucin y con los tratados internacionales
de la materia favoreciendo en todo tiempo a las personas la
proteccin ms amplia.
21. De este modo, los jueces nacionales deben inicialmente
observar los derechos humanos establecidos en la Constitucin
Mexicana y en los tratados internacionales de los que el Estado
mexicano sea parte, as como los criterios emitidos por el Poder
Judicial de la Federacin al interpretarlos y acudir a los criterios
interpretativos de la Corte Interamericana para evaluar si existe
VOTO CONCURRENTE EN LA
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
alguno que resulte ms favorecedor y procure una proteccin ms
amplia del derecho que se pretende proteger. Esto no prejuzga
sobre la posibilidad de que sean los criterios internos aquellos que
cumplan de mejor manera con lo establecido por la Constitucin en
trminos de su artculo 1, lo cual tendr que valorarse caso por
caso a fin de garantizar siempre la mayor proteccin de los derechos
humanos.
Por otra parte, me permito enfatizar que difiero sustancialmente
de la afirmacin contenida en el proyecto, en el sentido de que el
carcter vinculante de la jurisprudencia interamericana, autoriza a los
jueces internos a inaplicar incluso los precedentes del Poder Judicial
de la Federacin. Reconozco que tras la reforma constitucional de dos
mil once, se ha ampliado el marco de referencia para la solucin de
asuntos en donde se alega violacin a derechos fundamentales,
incluyendo los reconocidos en tratados internacionales. Empero,
dichas modificaciones no autorizan a este Alto Tribunal, a realizar un
pronunciamiento ex ante y genrico para que los jueces nacionales, en
todos los casos, inapliquen los precedentes del Poder Judicial de la
Federacin en aras de aplicar la jurisprudencia interamericana. Por el
contrario, debe recordarse que la regla general derivada de la ltima
parte del prrafo primero del artculo 1 constitucional consiste en que
los jueces nacionales siempre deben atender las restricciones
establecidas en la propia Constitucin.
Por lo tanto, en concordancia con la decisin tomada por el
Tribunal Pleno en el Caso Radilla y los argumentos que en su
momento expres al respecto, estimo que no debe establecerse el
carcter vinculante de los criterios interamericanos en aqullos
asuntos en los que el Estado mexicano no fue parte, siendo que stos
solamente pueden resultar orientadores. Por otra parte, en los asuntos
donde el Estado mexicano fue parte, por supuesto resultan
VOTO CONCURRENTE EN LA
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
obligatorios pero de conformidad con las restricciones expresas
contenidas en la Constitucin.
III.
Voto concurrente. Ahora bien, precisamente el tema de
las restricciones expresas constitucionales fue estudiado en la primera
parte de la sentencia aprobada y sobre la que emit voto concurrente.
Por
ello,
enseguida
consideraciones
que
expondr
compart
ciertas
al
precisiones
respecto,
sobre
mientras
las
que
respetuosamente me apartar de otros argumentos expuestos en
dicha resolucin.
En efecto, en la disertacin desarrollada en el cuerpo de la
sentencia, se interpret el artculo 1 constitucional en el sentido de
que el conjunto normativo previsto en dicho precepto se compone por
normas de derechos humanos, cuya fuente de reconocimiento puede
ser la Constitucin o un tratado internacional ratificado por Mxico,
escapa a la jerarqua normativa entre unos y otros. Lo anterior toda
vez que una de las principales aportaciones de la reforma
constitucional de dos mil once, es la creacin de un conjunto de
normas de derechos humanos que integran el nuevo parmetro de
control de regularidad o validez de las normas del ordenamiento
jurdico mexicano.
Al respecto, coincido en que los derechos humanos reconocidos
en la Constitucin y en los tratados internacionales se constituyen en
rango constitucional, como fue propuesto en el presente asunto. Sin
embargo, considero que es necesario atender a la salvedad
establecida en el artculo 1 constitucional. En este sentido, estimo
que cuando la norma constitucional reconoce un derecho y a
continuacin marca alguna restriccin expresa para su ejercicio, la
VOTO CONCURRENTE EN LA
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
norma de fuente internacional no puede rebasar este lmite, de
conformidad con la parte final del primer prrafo de su artculo, que a
continuacin se trascribe:
Artculo 1o. En los Estados Unidos Mexicanos todas las personas
gozarn de los derechos humanos reconocidos en esta Constitucin
y en los tratados internacionales de los que el Estado Mexicano sea
parte, as como de las garantas para su proteccin, cuyo ejercicio
no podr restringirse ni suspenderse, salvo en los casos y bajo
las condiciones que esta Constitucin establece ()
As, la reforma al numeral 1 de la Carta Magna solamente
introdujo un nuevo sistema de control constitucional y convencional,
que tiene que analizarse bajo la luz de los principios de universalidad,
interdependencia, indivisibilidad y progresividad. Sin duda, a la luz de
este nuevo paradigma, las normas de derechos humanos cuya fuente
sea un tratado internacional, debern ser tomadas en cuenta en los
casos en que resulten aplicables, para realizar la interpretacin ms
favorable a la persona, pero siempre teniendo presente las
restricciones que de manera expresa dispone la Carta Magna.
En esta medida los trminos de interaccin entre normas de
derechos humanos constitucionales e internacionales, estn definidos
en la parte final del propio artculo 1 constitucional. Por ello, si bien es
cierto que el principio de supremaca constitucional ha evolucionado a
partir de la reforma de dos mil once, el Constituyente Permanente no
ha cedido en reservarse la facultad de establecer las restricciones
aplicables a los derechos humanos, independientemente de que stos
provengan de una norma constitucional o internacional. Concluir lo
contrario, equivaldra a considerar que las normas internacionales de
derechos humanos no tienen lmites, mientras que las normas
constitucionales s los tendran, lo que resulta contrario al texto
VOTO CONCURRENTE EN LA
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
expreso en la ltima parte del primer prrafo del artculo 1
Constitucional.
Por lo tanto, en mi opinin, la interaccin entre las normas de
derechos
humanos
constitucionales
internacionales,
debe
desarrollarse conforme a los siguientes supuestos:
a) Cuando la Constitucin reconozca o enuncie un derecho sin
marcarle alguna restriccin a su ejercicio, la norma de fuente
internacional debe aplicarse, sin que exista impedimento para
poder hacer la interpretacin de las normas a la luz del
principio pro persona.
b) Cuando la norma constitucional mexicana establece una
restriccin al ejercicio de un derecho humano, en trminos de
la ltima parte del primer prrafo del artculo 1 constitucional
antes
transcrito,
es
aplicable
tanto
las
normas
constitucionales como a las normas de fuente internacional.
En este supuesto, no opera la interpretacin conforme con
una norma de derecho internacional, pues sta deber
atenerse en todo caso a las restricciones que marca el orden
constitucional.
As, en mi opinin el artculo 1 de la Carga Magna refleja el
principio de supremaca constitucional que conlleva implcito el
principio de jerarqua normativa, previsto en el artculo 133
constitucional. En consecuencia, la actuacin de los operadores al
enfrentarse a la necesidad de interpretar una norma de derechos
humanos, de fuente nacional o internacional, debe obedecer a las
restricciones expresas sealadas por la Constitucin.
VOTO CONCURRENTE EN LA
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Por lo expuesto, coincido con la resolucin adoptada por el
Tribunal Pleno, pero slo en la medida expuesta en el presente voto.
ATENTAMENTE
MINISTRO JORGE MARIO PARDO REBOLLEDO
SECRETARIO GENERAL DE ACUERDOS
LIC. RAFAEL COELLO CETINA
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
QUE FORMULA EL MINISTRO ARTURO
ZALDVAR
LELO
DE
LARREA
EN
RELACIN CON LA CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011,
RESUELTA POR EL TRIBUNAL EN PLENO DE LA SUPREMA
CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIN
El 3 de septiembre de 2013, el Pleno de la Suprema Corte de Justicia
de
la
Nacin
resolvi
la
contradiccin
de
tesis
293/2011.
No es exagerado decir que se trata de una decisin histrica en
muchos sentidos. Si las reformas constitucionales del 6 y 10 de junio
de 2011 provocaron el inicio de la Dcima poca del Semanario
Judicial de la Federacin, la presente decisin consolida al nuevo
paradigma constitucional y demuestra el compromiso de este Alto
Tribunal por ajustar sus criterios a una perspectiva cuyo eje central sea
el respeto y la garanta de los derechos humanos.
En efecto, los criterios jurisprudenciales aprobados al resolver la
presente contradiccin son de una gran trascendencia para el orden
jurdico nacional, toda vez que dotan de total eficacia a las reformas
constitucionales de junio de 2011 y consolidan la vigencia de un
bloque de constitucionalidad, el cual amplia considerablemente el
catlogo de derechos humanos as como su mbito de proteccin y
constituye el parmetro de control de la regularidad constitucional
conforme al cual los tribunales nacionales evaluarn la validez de
todas las leyes y actos jurdicos dentro del orden jurdico mexicano.
En este orden de ideas, dedicar la primera parte de este voto a
destacar la importancia del acuerdo al que lleg la mayora de los
miembros del Pleno de este Alto Tribunal para resolver la
contradiccin de tesis y a explicar las razones por las cuales modifiqu
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
el proyecto original elaborado bajo mi Ponencia;
posteriormente, expondr las razones que me llevan a
separarme de algunas consideraciones contenidas en
la sentencia que reflejan la opinin de la mayora de
los miembros del Pleno.
I.
VOTO ACLARATORIO sobre la modificacin de la propuesta
original sometida a consideracin del Pleno
En relacin con el tema de la presente contradiccin, conviene no
perder de vista que el surgimiento mismo de los Estados
constitucionales encuentra su justificacin precisamente en la
necesidad de proteger los derechos humanos de las personas, tanto
frente al resto de los miembros de la sociedad evitando con ello la
imposicin de la ley del ms fuerte, como frente a las autoridades
del Estado limitando as el ejercicio del poder pblico con la finalidad
de evitar abusos y arbitrariedades. En este sentido, histricamente la
lucha por los derechos humanos ha supuesto tanto la bsqueda de su
reconocimiento en los ordenamientos positivos como la creacin de
mecanismos adecuados para su proteccin. Al respecto, no debe
olvidarse que artculo XVI de la Declaracin Universal de los Derechos
del Hombre y del Ciudadano de 1789 ya estableca claramente que
una sociedad en la que la garanta de los derechos no est
asegurada,
ni
la
separacin
de
poderes
definida,
no
tiene
Constitucin.
En el caso mexicano, tuvo que pasar mucho tiempo para que el
conjunto
de
derechos
humanos
contemplados
en
el
texto
constitucional tuvieran una verdadera eficacia normativa y el juicio de
amparo se consolidara como un mecanismo efectivo para la
II
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
proteccin de esos derechos. Sin embargo, uno de los
temas pendientes del constitucionalismo mexicano era
que a pesar de que en el orden jurdico nacional se
haban incorporado diversos derechos humanos, stos
no se entendan como parte integrante de nuestra Constitucin y, en
consecuencia, no tenan la misma resistencia normativa ni eran
protegidos con la misma intensidad que aqullos que estaban
contemplados expresamente en el texto constitucional.1
El Poder Revisor de la Constitucin advirti esta problemtica y
en respuesta a esa situacin aprob las reformas de 6 y 10 de junio de
2011 con dos objetivos muy claros: por un lado, elevar a rango
constitucional todos los derechos humanos reconocidos en los
tratados internacionales de los que el Estado mexicano sea parte; y
por otro lado, otorgarles el mismo nivel de proteccin que a los
derechos humanos de fuente constitucional al hacer procedente el
juicio amparo contra la violacin de aqullos. En otras palabras, las
citadas enmiendas buscaron acabar con la existencia de derechos
humanos de segunda categora, para situar en el corazn de nuestra
carta constitucional un solo catlogo de derechos protegidos con la
misma intensidad.
Por su parte, pronunciarse sobre el alcance de las reformas
representaba para esta Suprema Corte la oportunidad de confrontar al
derecho mexicano con una realidad inobjetable: el hecho de que en
las sociedades contemporneas los derechos humanos constituyen
1
Como seala la doctrina especializada, la especial posicin que ocupan los derechos
fundamentales en el Estado constitucional se manifiesta en un reforzamiento de sus garantas o de
su resistencia jurdica frente a eventuales lesiones originadas en la actuacin de los poderes
pblicos y en primer lugar del legislador. Prieto Sanchs, Luis, Justicia constitucional y derechos
fundamentales, Madrid, Trotta, 2003, p. 230. En el mismo sentido, Riccardo Guastini ha sostenido
que en los sistemas de Constitucin rgida los derechos subjetivos conferidos por la Constitucin
[] se caracterizan por una especial capacidad de resistencia, por una proteccin realmente
especial. Guastini, Riccardo, Estudios de teora constitucional, Mxico, Fontamara, 2001, p. 232.
III
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
uno de los principales criterios para evaluar la
legitimidad democrtica de las instituciones, adems
de ser un motor de importantes cambios sociales. En
relacin con este punto, me permito recordar las
palabras de Aharon Barak, quien fuera Presidente de la Suprema
Corte de Israel durante once de los veintiocho aos que dur su
encargo:
La principal preocupacin de un tribunal constitucional en una
democracia no es corregir los errores individuales cometidos en las
sentencias de los tribunales inferiores. Ese es el trabajo de los
tribunales de apelacin. La principal preocupacin del tribunal
constitucional es la ms amplia accin correctiva de todo el sistema.
Esta accin correctiva se debera enfocar en dos problemas
principales: cerrar la brecha entre el derecho y la sociedad y proteger
la democracia.2
Cito estas palabras para enfatizar que una de las funciones
principales de la Suprema Corte de Justicia de la Nacin como tribunal
constitucional consiste en cerrar la brecha entre el derecho y la
sociedad mexicana, es decir, acercar el derecho a la realidad, en parte
transformndola, en parte nutrindose de ella. Si un tribunal
constitucional no pudiera llevar a cabo esta tarea, el derecho perdera
la capacidad de convertirse en factor de cambio social. Si esta
Suprema Corte no pudiera hacerse cargo de la necesidad de proteger
por igual todos los derechos humanos, entonces la legitimidad
democrtica de nuestras instituciones estara seriamente cuestionada.
Ahora bien, aun cuando desde mi punto de vista la intencin del
Poder Revisor de la Constitucin al aprobar las referidas reformas era
totalmente trasparente, es incontestable que stas se plasmaron en un
texto que requera ser interpretado, de tal manera que no slo
2
Barak, Aharon, Un juez reflexiona sobre su labor: el papel de un tribunal constitucional en
una democracia, Mxico, SCJN, 2009, p. 1.
IV
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
pudieran disiparse las dudas existentes entre los
operadores jurdicos sobre los alcances de las
enmiendas, sino tambin dotar de total eficacia a
dichas reformas en concordancia con el nuevo
paradigma constitucional.
De ah la importancia de la discusin que tuvo lugar en la
Suprema Corte de Justicia de la Nacin con motivo de la resolucin de
la contradiccin de tesis 293/2011. As, este Alto Tribunal se
encontraba llamado a establecer, con carcter obligatorio para todas
las autoridades jurisdiccionales del pas, el alcance de las reformas
constitucionales de junio de 2011. Ms especficamente, esta
Suprema Corte tena que determinar si los derechos humanos
reconocidos en tratados internacionales e incorporados a nuestro
orden jurdico tenan rango constitucional, como pareca era la
intencin del Poder Revisor, o si seguiran siendo derechos humanos
de segunda categora al gozar de una proteccin disminuida.
Aunque en los trminos antes descritos la decisin pareca
sencilla, en realidad conllevaba el enfrentamiento de dos formas
distintas de entender el derecho: uno segn el cual los derechos
humanos contenidos en el texto constitucional seran los nicos que se
ubicaran en la cspide de nuestro sistema normativo; y otro que
entiende que la proteccin de los derechos de las personas no
depende de las caractersticas del instrumento normativo que los
reconoce y que sostiene que, desde el punto de vista material, puede
haber
normas
constitucionales
fuera
del
documento
al
que
formalmente denominamos Constitucin.
Como puede advertirse, una discusin como sta exiga un
debate robusto y abierto, en el que todos los integrantes del mximo
V
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
rgano jurisdiccional del pas expusiramos nuestras
posturas. En esta lnea, para nadie es un secreto que
los miembros de un rgano colegiado suelen tener
opiniones y puntos de vista distintos en relacin con
los asuntos que son puestos a su consideracin. De hecho, las
diferencias ideolgicas son un rasgo caracterstico de la integracin de
las altas cortes en todo el mundo. Sin embargo, el pluralismo
ideolgico no puede servir de justificacin para la parlisis, mucho
menos cuando el rgano colegiado del que se trata es un tribunal
constitucional.
En nuestro caso, la Suprema Corte de Justicia de la Nacin tiene
una conformacin plural, tanto desde el punto de vista ideolgico como
profesional. No obstante, el punto en comn entre los miembros que la
integran es que se trata de once juristas cuya designacin como
Ministros supuso un reconocimiento a sus intachables trayectorias
profesionales. De esta manera, es de esperarse que cada uno de los
miembros del Pleno tenga sus propias concepciones sobre el derecho
y las defienda con vigor. Sin embargo, estaramos muy equivocados si
creyramos que las decisiones jurisdiccionales de rganos colegiados
son el resultado de una votacin donde simplemente una postura
resulta vencedora y las dems visiones son derrotadas. Las cosas son
mucho ms complejas que eso. Una sentencia de la Suprema Corte
debe entenderse como el resultado de la deliberacin de un cuerpo
colegiado que intenta construir una postura compartida, enriquecida
por los diversos matices y posicionamientos de los Ministros que
conforman la mayora que la aprueba, que tambin debe hacerse
cargo de los argumentos formulados por quienes sostienen opiniones
contrarias.
VI
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
En relacin con este tema, Gustavo Zagrebelsky
ha destacado la importancia del consenso en sede de
justicia constitucional. Para el ex Presidente de la
Corte Constitucional italiana, si bien en principio
podra caracterizarse a la legislacin como el mbito de aquello sobre
lo que se vota, mientras que la justicia constitucional sera el mbito
de aquello sobre lo que no se vota porque es res pblica, es
indiscutible que las decisiones sobre el contenido de la Constitucin
tambin
son
objeto
de
votacin.
En
orden
de
ideas,
el
constitucionalista italiano seala lo siguiente:
En estos casos, es natural buscar la solucin ms compartida. La
unanimidad sera el optimum. Si no se puede alcanzar, se trabaja al
menos para lograr el mximo consenso posible. El recurso al voto de
mayora es solo el remedio extremo a un defecto: la incapacidad para
crear consenso sobre los argumentos propios y la indisponibilidad a
dejarse convencer por los dems. Las decisiones de cinco contra
cuatro o, en nuestra Corte constitucional, de ocho contra siete dejan
siempre un sentimiento de insatisfaccin, como el que se tiene frente
a un deber no cumplido a plenitud. Con este tipo de decisiones, las
Cortes constitucionales se exponen a la crtica poltica, es decir, a la
de haber actuado arbitrariamente como pequeos parlamentos, en los
que el conflicto mayora-minora es fisiolgico 3 (nfasis aadido).
En estos trminos, celebro que el 3 de septiembre de 2013, diez
Ministras y Ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nacin
hayamos llegado a un consenso histrico en relacin con el rango
constitucional de todos y cada uno de los derechos humanos
reconocidos por el ordenamiento jurdico mexicano. Lo celebro porque
ese da se hizo historia, al adoptar una decisin de Corte, mediante
la cual los integrantes de esta Alto Tribunal dejamos de lado nuestras
divergencias para privilegiar nuestras coincidencias, en aras de dar un
paso firme hacia una efectiva proteccin de los derechos humanos de
3
La cita est tomada de un discurso pronunciado por el tambin profesor de la Universidad
de Turn con motivo del cincuenta aniversario de la Corte Constitucional italiana. Cfr. Zagrebelsky,
Gustavo, Jueces constitucionales, en Miguel Carbonell (ed.), Teora del neoconstitucionalismo.
Ensayos escogidos, Madrid, Trotta-IIJ, 2007, p.102.
VII
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
todas las personas, al reconocerlos, sin distinciones,
como parte de nuestra Constitucin.
Quiero destacar que diez Ministros de esta
Suprema Corte entendimos que la funcin de un juez constitucional
est ms all de la visin que cada uno de nosotros tengamos sobre el
derecho. Al respecto, recientemente se ha recordado la forma en la
que John Roberts, Chief Justice en la actual integracin de la Corte
Suprema estadounidense, define una virtud indispensable en la
construccin jurisprudencial del derecho: el temperamento judicial. De
acuerdo con Roberts, se trata de la disposicin del juez para tomar
distancia de sus propias convicciones sobre la manera correcta de
aproximarse a los problemas jurdicos y tener la capacidad de evaluar
su visin del derecho a la luz de su funcin como juez.4 En este
sentido, de acuerdo tambin con Roberts, la diferencia entre un buen
juez y un acadmico consiste precisamente en que, a diferencia del
segundo, el primero puede suprimir su agenda ideolgica o su deseo
de protagonismo con la finalidad de lograr los consensos y la
estabilidad que requiere la funcin institucional que desempea un alto
tribunal.5
Desde mi punto de vista, esta amplitud de miras prevaleci entre
los Ministros que aprobamos el criterio sobre el primer punto de la
contradiccin de tesis. Al respecto, es oportuno recordar que en mi
calidad de Ponente somet a la consideracin del Pleno de esta
Suprema Corte un proyecto de resolucin que contena mi propia
visin sobre los dos temas de la contradiccin de tesis. Con todo,
como suele ocurrir con el trabajo jurisdiccional en un rgano colegiado,
dicha propuesta nicamente fue el punto de partida para la
4
Rosen, Jeffrey, The Supreme Court: The Personalities and Rivalries that Defined America,
Nueva York, Times Books, 2007, p. 7.
5
dem.
VIII
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
construccin de una postura compartida por la
mayora de mis compaeros Ministros.
En esta lnea, hay que tener en cuenta que
durante las primeras sesiones de la discusin pblica de este asunto,
las intervenciones de los integrantes del Pleno se centraron en dos
problemas: el debate sobre la jerarqua de los derechos humanos de
fuente internacional; y la forma en la que deben operar las
restricciones expresas al ejercicio de los derechos humanos que se
encuentran contenidas en el texto constitucional. En relacin con el
primer tema, la consulta tena una postura muy clara: estableca la
jerarqua
constitucional
de
los
derechos
humanos,
independientemente de que su fuente de reconocimiento fuera un
tratado internacional. En relacin con el segundo aspecto, el proyecto
original no abordaba el tema de las restricciones expresas al ejercicio
de los derechos humanos en el texto constitucional porque no era
parte de la contradiccin de tesis.
As, tal como lo propona la consulta, una mayora de los
integrantes del Pleno sostuvimos que los derechos humanos
contemplados en tratados internacionales firmados y ratificados por el
Estado mexicano tienen rango constitucional. Por otro lado, a pesar de
que no formaba parte de la contradiccin de tesis, una mayora de
Ministros decidi que deba abordarse el tema de las restricciones
constitucionales al ejercicio de los derechos humanos. Sobre este
punto, la mayora de mis compaeros se pronunciaron a favor del
criterio de que cuando en la Constitucin hubiera una restriccin
expresa al ejercicio de los derechos humanos, se debera estar a lo
que indica el texto constitucional.
IX
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
En este escenario, entend que era necesario
hacer un esfuerzo por acercar mi posicin a la de mis
compaeros Ministros, con la intencin de llegar a un
punto de encuentro que nos condujera a establecer un
criterio que consolidara la vigencia de un catlogo constitucional de
derechos como parmetro de control de la regularidad de todas las
leyes y actos jurdicos, y a la vez brindara certeza a los operadores
jurdicos. Por esa razn, tom la decisin de modificar el proyecto,
pero sin desvirtuar el sentido de la propuesta original.
En esta lnea, la nueva propuesta consisti en mantener el
reconocimiento del rango constitucional de los derechos humanos,
independientemente de que su fuente de reconocimiento fuera un
tratado internacional, al tiempo que se introdujo una clusula que
establece que cuando en la Constitucin hubiera una restriccin
expresa al ejercicio de los derechos humanos, se deber estar a lo
que indica el texto constitucional. Por lo dems, con la finalidad de
evitar desacuerdos adicionales, no se incorpor ninguna justificacin o
explicacin de dicha clusula, de tal manera que los cambios al
proyecto fueron en realidad mnimos.
Es de la mayor relevancia precisar que lo alcanzado no
constituy un simple acuerdo, pues no se adopt una postura que
sumara la ideologa de cada Ministro en lo individual, ni se trat de una
negociacin en la que los miembros del Alto Tribunal nos hiciramos
recprocas concesiones. Ninguna de las seoras y seores Ministros
comprometimos nuestras convicciones personales en la construccin
de este amplio consenso.
Ahora bien, a pesar de que personalmente no comparto el
contenido de la citada modificacin, por las razones que expondr
X
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
detalladamente
en
mi
voto
concurrente,
quiero
destacar claramente cules fueron los avances con
esta decisin que resulta obligatoria para todos los
tribunales del pas.
En primer lugar, se ampli el catlogo de derechos humanos con
rango constitucional, quedando claro que los derechos humanos
reconocidos en los tratados internacionales firmados y ratificados por
el Estado mexicano son Constitucin. Segundo, dicho bloque de
constitucionalidad constituye el parmetro de control de validez de
todas las normas generales y actos jurdicos dentro del orden jurdico
mexicano,
de
forma
que
si
stas
lo
contraran
devienen
inconstitucionales. Tercero, al establecerse la vinculatoriedad de todos
los precedentes de la Corte Interamericana, incluyendo aqullos
donde el Estado mexicano no fue parte y siempre que stos
favorezcan a las personas la proteccin ms amplia, se extendi de
manera importante el mbito protector de los derechos humanos.
Consecuentemente, esta decisin fortaleci contundentemente la
proteccin y la garanta de los derechos humanos en Mxico, lo cual
constituye un avance de la mayor envergadura dentro de la historia del
constitucionalismo mexicano.
Asimismo, es importante destacar tambin la trascendencia de
esta determinacin en trminos prudenciales y estratgicos. Al
respecto, no debe perderse de vista que el aspecto medular del
debate se centr en determinar si todos los derechos humanos,
independientemente de que su fuente de reconocimiento hubiera sido
un tratado internacional, tienen jerarqua constitucional, de modo que
el mensaje que deba enviar el Pleno de la Suprema Corte de Justicia
de la Nacin requera claridad y contundencia, tena que confirmar
que, a pesar de las discrepancias ideolgicas entre los Ministros, no
XI
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
existe ninguna duda sobre un punto: todos los
derechos humanos tienen rango constitucional dentro
de
nuestro
ordenamiento
jurdico.
El
resto
de
discusiones conexas puede continuar desarrollndose
paulatinamente, como tradicionalmente ha ocurrido con muchos otros
temas.
Si bien hubo que aceptar incluir la clusula que establece que
cuando en la Constitucin hubiera una restriccin expresa al ejercicio
de los derechos humanos, se deber estar a lo que indica el texto
constitucional, la decisin adoptada fue la mejor posible si tiene en
cuenta el contexto en el que sta se tom. Primero, haba que darle a
los operadores jurdicos un criterio claro que pudiera servir para la
resolucin de los conflictos que se estn presentando en distintas
instancias jurisdiccionales sobre este tema. Segundo, de sostenerse
mi proyecto original y aguardar a que otro Ministro elaborara uno
nuevo habra resultado intil, pues su discusin difcilmente habra
arrojado un resultado diverso. Tercero, no poda postergarse el debate
y esperar una nueva integracin del Pleno, lo cual nos hubiera llevado
a volver a discutir la problemtica ms all del 2015, adems de que
nada garantizaba que con una nueva integracin se hubiera llegado al
consenso de sostener el rango constitucional de todos los derechos
humanos. Consecuentemente, apost por el consenso, desde una
tica de la responsabilidad y de la conviccin, a efecto de adoptar una
determinacin
que
permitiera
esta
Suprema
Corte
seguir
construyendo una slida doctrina jurisprudencial en materia de
derechos humanos y emitir un criterio claro para que el resto de los
tribunales mexicanos pudiera resolver los asuntos de su competencia
en relacin con este tema.
XII
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
En resumen, considero que la Suprema Corte de
Justicia de la Nacin actu responsablemente el 3 de
septiembre de 2013, pues adopt una postura
constitucional consensuada que refleja la posicin
ampliamente mayoritaria entre los Ministros, sin postergar la adopcin
de una determinacin que permitiera la consolidacin de las reformas
constitucionales de 2011. sta era una deuda que nuestro Alto
Tribunal haba contrado con el resto de los tribunales mexicanos, con
el propio Poder Reformador, con los justiciables y con la historia
constitucional de Mxico. La sociedad civil y los actores polticos
nacionales han realizado muchos esfuerzos para fortalecer la
proteccin de los derechos humanos en nuestro pas. Por lo que toca
al tema que nos ocupa, puedo decir con satisfaccin que la Suprema
Corte de Justicia de la Nacin ha cumplido con su parte.
II. VOTO CONCURRENTE en relacin con las consideraciones
que hacen referencia a la forma en que operan las
restricciones constitucionales
El consenso histrico que se construy para adoptar una decisin de
Corte en el presente asunto dio lugar al criterio recogido en la primera
de las tesis de la presente contradiccin. Por un lado, en dicho criterio
se estableci el rango constitucional de todos los derechos humanos,
independientemente de que su fuente de reconocimiento fuera un
tratado internacional. Y por otro lado, se introdujo una clusula donde
se seal con toda claridad que cuando en la Constitucin hubiera
una restriccin expresa al ejercicio de los derechos humanos, se
deber estar a lo que indica el texto constitucional. En este sentido,
en el presente voto expondr las razones por las cuales no comparto
XIII
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
esta segunda parte del criterio adoptado en la
contradiccin de tesis 293/2011.
En primer lugar, no deben confundirse las
restricciones al ejercicio de los derechos humanos con los lmites,
modalidades o configuraciones que stos pueden adoptar de
conformidad con la Constitucin. No obstante, estos conceptos no
sern desarrollados en este lugar, toda vez que su explicacin excede
con mucho los propsitos del presente voto concurrente. En este
orden de ideas, es preciso sealar que los trminos restringirse o
restringir se utilizan en el texto constitucional de diferentes formas en
contextos relacionados con derechos humanos.
Un primer ejemplo de cmo es utilizado este trmino lo
encontramos en el artculo 29 constitucional, el cual establece que el
ejercicio de los derechos humanos slo podra restringirse en los
casos de invasin, perturbacin grave de la paz pblica, o de
cualquier otro que ponga a la sociedad en grave peligro o conflicto, es
decir, en el supuesto de un estado de excepcin.6
Por otro lado, en el texto constitucional tambin se utiliza el
trmino restringir en supuestos distintos a los que hace referencia el
artculo 29 constitucional, lo cual pone en evidencia la ambigedad de
la que se ha venido hablado. As, por ejemplo, se establece la
prohibicin de restringir el derecho a difundir opiniones, informacin e
ideas, a travs de cualquier medio (artculo 7) o la posibilidad de
Al respecto, coincido con Pedro Salazar en el sentido de que el objetivo legtimo de
dichas situaciones excepcionales no es la proteccin del Estado como fin en s mismo lo cual
sera, acorde con perspectivas comunitaristas, utilitaristas o estatalistas, sino de aquellas
instituciones que brindan garanta a los derechos fundamentales. Cfr. Salazar, Pedro, Del Estado
de excepcin a la suspensin constitucionalizada, en Miguel Carbonell y Pedro Salazar (coords.),
La reforma constitucional de derechos humanos. Un nuevo paradigma, Mxico, UNAM-IIJ, 2012, p.
276.
XIV
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
restringir las comunicaciones de los inculpados y
sentenciados
por
delincuencia
organizada
con
terceros (artculo 18).
Ahora bien, con independencia de la ambigedad que afecta al
trmino restricciones, en la teora constitucional resulta pacfico
sostener que los derechos humanos no son absolutos. As lo ha
reconocido la propia Corte Interamericana de Derechos Humanos, al
sealar que salvo algunos derechos que no pueden ser restringidos
bajo ninguna circunstancia, como el derecho a no ser objeto de tortura
o de tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes, los derechos
humanos no son absolutos.7 En relacin con este punto, puede surgir
vlidamente la siguiente pregunta: es legtimo que una Constitucin
establezca restricciones al ejercicio de algunos derechos humanos?
En mi opinin, la respuesta es afirmativa: tanto el Constituyente
como el Poder Revisor de la Constitucin son legisladores
democrticos que pueden restringir legtimamente el ejercicio de los
derechos
humanos.
En
efecto,
el
reconocimiento
del
rango
constitucional de los derechos humanos contenidos en los tratados
internacionales de los que el Estado mexicano es parte no implica
descartar que su ejercicio sea susceptible de restringirse. Con todo, el
problema central no se ubica en la discusin de la legitimidad de la
existencia de dichas restricciones, sino ms bien en la valoracin caso
por caso de cada una de stas a la luz de las exigencias que impone
la vigencia de un Estado democrtico y constitucional de derecho.
Lo que no puedo compartir bajo ningn punto de vista es que el
reconocimiento de que los derechos humanos no son absolutos nos
7
Corte IDH, Castaeda Gutman vs. Estados Unidos Mexicanos, Excepciones Preliminares,
Fondo, Reparaciones y Costas, Sentencia de 6 de agosto de 2008, Serie C No. 184, prrafo 174.
XV
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
lleve al extremo o absurdo de interpretar las
restricciones al ejercicio de esos derechos en el
sentido de hacerlos nugatorios o vaciarlos totalmente
de contenido. No debe perderse de vista que los
derechos humanos constituyen cartas de triunfo frente a las
decisiones mayoritarias,8 de tal manera que configuran ese reducto al
que se ha hecho alusin con expresiones como la esfera de lo
indecidible9, el territorio inviolable10 o el coto vedado11 para las
mayoras. En este sentido, el filsofo argentino Ernesto Garzn Valds
ha sealado recientemente lo siguiente:
Los derechos humanos o fundametales (civiles, polticos, sociales)
que incluyo en los que he llamado coto vedado a las decisiones
mayoritarias forman parte esencial de un diseo constitucional
adecuado para lograr la concrecin de las exigencias del respeto a la
dignidad humana. Cuando estos derechos tienen vigencia, queda
bloqueada la posibilidad de tratar a una persona como medio. Su
otorgamiento y respeto no es un acto de benevolencia por parte de
quien o quienes detentan el poder, sino una exigencia bsica en toda
sociedad que pretenda ser decente. Por ello, la concesin de estos
derechos no se suplica sino que se exige [].12
Desde mi punto de vista, el nuevo paradigma constitucional
obliga a reinterpretar todo el texto de la Constitucin a la luz del
contenido del artculo 1, el cual fue reformado primeramente en el ao
2000 para introducir la prohibicin de no discriminacin y el principio
8
Dworkin, Ronald, Los derechos en serio, Barcelona, Ariel, 1984, p. 37.
Esta expresin ha sido acuada por Luigi Ferrajoli, quien apunta que su concepto se
distingue del territorio inviolable de Norberto Bobbio y del coto vedado de Garzn Valds en el
sentido de que la esfera de lo indecidible constituye una categora jurdica, mientras que los otros
dos conceptos hacen referencia a categoras filosficas-polticas. Para este autor, las
constituciones han sometido a la poltica a esa esfera de lo indecidible. Al respecto, vase
Ferrajoli, Luigi, La esfera de lo indecidible y la divisin de poderes, en Estudios Constitucionales,
ao 6, no. 1, 2008, pp. 337-343.
10
Bobbio, Norberto, La regla de la mayora: lmites y aporas, en Fernndez Santilln,
Jos (comp.), Norberto Bobbio: el filsofo y la poltica, Mxico, Fondo de Cultura Econmica, 1997,
pp. 268-269.
11
Respecto al coto vedado, el filsofo argentino ha sealado que los derechos incluidos
en dicho concepto son aqullos vinculados con la satisfaccin de los bienes bsicos, es decir, que
son condicin necesaria para la realizacin de cualquier plan de vida. Al respecto, vase Garzn
Valds, Ernesto, Algo ms acerca del coto vedado, en Doxa, no. 6, 1989, pp. 209-213.
12
Garzn Valds, Ernesto, Propuestas, Madrid, Trotta, 2011, p. 99.
9
XVI
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
de dignidad personal y, posteriormente, en 2011 al
incorporar con rango constitucional los derechos
humanos cuya fuente de reconocimiento son los
tratados
internacionales
de
los
que
el
Estado
mexicano es parte.
En esta lnea, a lo largo de mi trayectoria como Ministro de este
Alto Tribunal, he adoptado consistentemente una metodologa
coherente con el nuevo paradigma constitucional. As, los derechos
humanos deben ser interpretados de forma armnica y conforme a
todos los contenidos constitucionales,13 procurando siempre maximizar
su mbito protector y minimizar las posibles restricciones a su
ejercicio. Por lo dems, esta metodologa debe apoyarse en los
principios de no discriminacin, pro persona, interpretacin conforme,
universalidad,
interdependencia,
indivisibilidad
progresividad,
contenidos todos en el artculo 1 constitucional. 14
Esta aproximacin tiene el efecto de que en algunos casos las
restricciones constitucionales al ejercicio de los derechos humanos se
desdibujen o desvanezcan y, en otros casos, se apliquen cabalmente,
por ejemplo, cuando la propia la restriccin protege derechos humanos
de terceros o garantiza la igualdad material entre las personas, en el
entendido de que se trata de una cuestin que habr que examinar
caso por caso.
13
Para Eduardo Ferrer Mac-Gregor, la clusula de interpretacin conforme constituye una
tcnica hermenutica por medio de la cual los derechos los derechos y libertades constitucionales
son armonizados con los valores, principios y normas contenidos en los tratados internacionales
sobre derechos humanos signados por la jurisprudencia de los tribunales internacionales (y en
ocasiones otras resoluciones y fuentes internacionales), para lograr su mayor eficacia y
proteccin. Vase Ferrer Mac-Gregor, Eduardo, Interpretacin conforme y control difuso de
convencionalidad, en Miguel Carbonell y Pedro Salazar (coords.), op. cit., p. 358.
14
En relacin con este tema, me gustara destacar las importantes aportaciones
metodolgicas contenidas en el libro de Caballero Ochoa, Jos Luis, La interpretacin conforme. El
modelo constitucional ante los tratados internacionales sobre derechos humanos y el control de
convencionalidad, Mxico, Porra, 2013
XVII
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Por
ello,
desde
antes
de
las
reformas
constitucionales de junio de 2011, he sealado que los
derechos humanos deben interpretarse de forma
armnica con el resto de contenidos constitucionales.
As
lo
propuse
durante
la
discusin
de
la
accin
de
inconstitucionalidad 48/2009,15 donde sostuve que a pesar de que el
artculo 32 constitucional aparentemente autoriza al Congreso de la
Unin para legislar en materia de doble nacionalidad y establecer
diferencias entre mexicanos por nacimiento y por naturalizacin,16
dicha
facultad
constitucional
deba
entenderse
acotada,
interpretndola de acuerdo con la clusula de interpretacin conforme,
el principio pro persona y, por tanto, atendiendo a la prohibicin de
discriminacin contenida en el ltimo prrafo del artculo 1
constitucional.
Una vez reformada la Constitucin en junio de 2011, he seguido
insistiendo
en
la
necesidad
de
armonizar
los
contenidos
constitucionales, de forma que las normas relativas a los derechos
humanos, incluyendo las que restrinjan su ejercicio, se interpreten
conforme al contenido de los derechos humanos, independientemente
de que su fuente sea un tratado internacional, y siempre favoreciendo
en todo tiempo la proteccin ms amplia a las personas como lo
ordena la propia Constitucin.
En congruencia con los criterios metodolgicos antes sealados,
mantuve una posicin similar durante la discusin de varios asuntos
15
Resuelto por el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nacin mediante sentencia
de 14 de abril de 2011, bajo la ponencia del Ministro Sergio A. Valls Hernndez.
16
Artculo 32. La Ley regular el ejercicio de los derechos que la legislacin mexicana
otorga a los mexicanos que posean otra nacionalidad y establecer normas para evitar conflictos
por doble nacionalidad.
El ejercicio de los cargos y funciones para los cuales, por disposicin de la presente Constitucin, se requiera
ser mexicano por nacimiento, se reserva a quienes tengan esa calidad y no adquieran otra nacionalidad. Esta
reserva tambin ser aplicable a los casos que as lo sealen otras leyes del Congreso de la Unin.
[]
XVIII
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
posteriores a las reformas constitucionales de junio de
2011, entre los que destaco el amparo en revisin
151/2011,17 resuelto por el Pleno de esta Suprema
Corte. En dicho caso se analiz si el traslado de reos
lejos del lugar de su domicilio constitua o no una violacin a algn
derecho humano. En esa ocasin manifest que el artculo 18
constitucional reconoca el derecho fundamental de todo reo a estar
privado de su libertad en los centros penitenciarios ms cercanos a su
domicilio,18 salvo en los casos de delincuencia organizada, sin que
dicha restriccin pudiera interpretarse en el sentido de otorgar una
facultad discrecional al legislador ordinario que hiciera nugatorio ese
derecho, anulando o menoscabando su contenido esencial.
Sin embargo, existen casos en los que no es posible lograr la
armonizacin de los contenidos constitucionales (debido a que dos o
ms normas constitucionales regulan de forma diferenciada el
contenido de un mismo derecho), por lo que en un segundo momento
he considerado que debe aplicarse el principio pro persona en su
vertiente de criterio de preferencia de normas, de tal manera que se
prefiera la norma que favorezca en todo momento la proteccin ms
amplia a las personas, tal y como lo ha sostenido reiteradamente la
Primera Sala de esta Suprema Corte en varios asuntos.19
17
Resuelto por el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nacin mediante sentencia
de 12 de enero de 2012, bajo la ponencia del Ministro Sergio A. Valls Hernndez.
18
Artculo 18. []
Los sentenciados, en los casos y condiciones que establezca la ley, podrn compurgar sus
penas en los centros penitenciarios ms cercanos a su domicilio, a fin de propiciar su reintegracin
a la comunidad como forma de reinsercin social. Esta disposicin no aplicar en caso de
delincuencia organizada y respecto de otros internos que requieran medidas especiales de
seguridad.
19
PRINCIPIO PRO PERSONA. CRITERIO DE SELECCIN DE LA NORMA DE
DERECHO FUNDAMENTAL APLICABLE. De conformidad con el texto vigente del artculo 1o.
constitucional, modificado por el decreto de reforma constitucional publicado en el Diario Oficial de
la Federacin el 10 de junio de 2011, en materia de derechos fundamentales, el ordenamiento
jurdico mexicano tiene dos fuentes primigenias: a) los derechos fundamentales reconocidos en la
Constitucin Poltica de los Estados Unidos Mexicanos; y, b) todos aquellos derechos humanos
establecidos en tratados internacionales de los que el Estado mexicano sea parte.
Consecuentemente, las normas provenientes de ambas fuentes, son normas supremas del
ordenamiento jurdico mexicano. Esto implica que los valores, principios y derechos que ellas
XIX
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
Desde mi punto de vista, un caso emblemtico
que estaba mencionado en el proyecto original y que
ejemplifica el supuesto antes descrito es la accin de
inconstitucionalidad 155/2007,20 resuelta por el Pleno de este Alto
Tribunal. En ese asunto consider que deba preferirse la norma de
fuente internacional que regulaba el derecho humano al libre ejercicio
del trabajo (Convenio 29 de la Organizacin Internacional del Trabajo,
que slo faculta a las autoridades judiciales para sancionar con trabajo
a favor de la comunidad),21 sobre la norma que regulaba el mismo
derecho en el texto constitucional (cuarto prrafo del artculo 21
constitucional que faculta a las autoridades administrativas para
sancionar a las personas con trabajo a favor de la comunidad en el
caso en que infrinjan los reglamentos gubernativos o de polica),22
partiendo de la premisa de que ambas formaban parte de un mismo
materializan deben permear en todo el orden jurdico, obligando a todas las autoridades a su
aplicacin y, en aquellos casos en que sea procedente, a su interpretacin. Ahora bien, en el
supuesto de que un mismo derecho fundamental est reconocido en las dos fuentes supremas del
ordenamiento jurdico, a saber, la Constitucin y los tratados internacionales, la eleccin de la
norma que ser aplicable -en materia de derechos humanos-, atender a criterios que favorezcan
al individuo o lo que se ha denominado principio pro persona, de conformidad con lo dispuesto en
el segundo prrafo del artculo 1o. constitucional. Segn dicho criterio interpretativo, en caso de
que exista una diferencia entre el alcance o la proteccin reconocida en las normas de estas
distintas fuentes, deber prevalecer aquella que represente una mayor proteccin para la persona
o que implique una menor restriccin. En esta lgica, el catlogo de derechos fundamentales no se
encuentra limitado a lo prescrito en el texto constitucional, sino que tambin incluye a todos
aquellos derechos que figuran en los tratados internacionales ratificados por el Estado mexicano
(nfasis aadido) [Tesis 1./J. 107/2012. Publicada en el Semanario Judicial de la Federacin y su
Gaceta, Dcima poca, libro XIII, octubre de 2012, tomo 2, prrafo 799].
20
Resuelto por el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nacin mediante sentencia
de 7 de febrero de 2012, bajo la ponencia del Ministro Sergio Salvador Aguirre Anguiano
(encargado del engrose: Ministro Jos Ramn Cosso Daz).
21
2. Sin embargo, a los efectos del presente Convenio, la expresin "trabajo forzoso u
obligatorio" no comprende:
[]
c) Cualquier trabajo o servicio que se exija a un individuo en virtud de una condena
pronunciada por sentencia judicial, a condicin de que este trabajo o servicio se realice bajo la
vigilancia y control de las autoridades pblicas y que dicho individuo no sea cedido o puesto a
disposicin de particulares, compaas o personas jurdicas de carcter privado;
[] (Subrayado en este voto).
22
Artculo 21.- [] Compete a la autoridad administrativa la aplicacin de sanciones por
las infracciones de los reglamentos gubernativos y de polica, las que nicamente consistirn en
multa, arresto hasta por treinta y seis horas o en trabajo a favor de la comunidad; pero si el
infractor no pagare la multa que se le hubiese impuesto, se permutar sta por el arresto
correspondiente, que no exceder en ningn caso de treinta y seis horas [] (Subrayado en este
voto).
XX
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
parmetro de control de regularidad constitucional de
las dems normas del sistema jurdico y de la
consideracin de que la norma de fuente internacional
era ms protectora de la persona que la derivada del
texto constitucional.
Al respecto, en la discusin de este asunto en el Pleno sostuve
que el artculo 1 constitucional reformado en junio de 2011 prev y
privilegia el contenido de los derechos frente a una cuestin de
jerarqua, y aduje que tenamos que abandonar nuestros criterios
tradicionales interpretativos donde todo lo vemos de una forma
piramidal, adems de que el problema planteado no se trataba de que
un tratado internacional invalide una norma constitucional, sino de
que la propia Constitucin nos establece que en esta amalgama de
derechos, de normas, se prefiera siempre aqulla que beneficie ms a
la persona, independientemente de que la norma que regule un
derecho humano est contenida en el texto constitucional y sea ms
restrictiva.
Por
lo
dems,
quiero
destacar
que
esta
metodologa
interpretativa no es ajena a otros sistemas jurdicos. En su resolucin
a la controversia C-251/97, el Tribunal Constitucional colombiano
reconoci el carcter constitucional y vinculante de la clusula de
favorabilidad en la interpretacin de los derechos humanos, segn la
cual en caso de conflictos entre distintas normas que consagran o
desarrollan estos derechos, el intrprete debe preferir aqulla que sea
ms favorable al goce de los derechos23.
23
La sentencia del 28 de mayo de 1997 (ponente: Alejandro Martnez Caballero) puede ser
consultada en la pgina de Internet de la Corte Constitucional Colombiana:
http://www.corteconstitucional.gov.co/RELATORIA/1997/C-251-97.htm.
XXI
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
En esta lnea, un ejemplo de aplicacin por la
Corte Constitucional colombiana de esta la clusula de
favorabilidad en la interpretacin de los derechos
humanos lo constituye la sentencia de tutela T646/11, donde dicho tribunal prefiri la norma constitucional porque
garantizaba de forma ms favorable a las personas el derecho de
acceso a la educacin (al prever la gratuidad de la educacin bsica
primaria y media), mientras la norma contenida en el tratado
internacional slo garantizaba la gratuidad de la educacin primaria
(artculo 13 del Pacto Internacional de Derechos Econmicos, Sociales
y Culturales y artculo 28 de la Convencin de los Derechos del Nio).
As, en dicho caso, la Corte Constitucional colombiana estableci que
segn la jurisprudencia constitucional, la contradiccin entre una
norma constitucional y una norma internacional que hace parte del
bloque de constitucionalidad se debe resolver de acuerdo con el
principio pro homine bajo el cual el intrprete debe escoger y aplicar la
regulacin que sea ms favorable a la vigencia de los derechos
humanos, en este caso la norma constitucional.24
Ahora bien, si bien he expuesto mi visin en torno a la forma en
la que considero deben operar las restricciones a los derechos
humanos en el marco del nuevo paradigma constitucional, un
problema distinto es cmo debe interpretarse la clusula introducida
en la primera tesis de la contradiccin donde se seala que cuando
en la Constitucin haya una restriccin expresa al ejercicio de los
derechos humanos, se deber estar a lo que indica el texto
constitucional y qu justificacin se pueda dar a sta.
24
La sentencia del 1 de septiembre de 2011 (ponente: Magistrado Humberto Antonio
Serra Porto) puede ser consultada en la pgina de Internet de la Corte Constitucional Colombiana:
http://www.corteconstitucional.gov.co/relatoria/2011/T-646-11.htm. Actualmente, el magistrado ponente
es el Presidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
XXII
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
En mi opinin, los alcances precisos de dicha
clusla tambin tendrn que precisarse caso por caso,
no slo porque la tcnica legislativa utilizada en la
Constitucin para establecer restricciones expresas al
ejercicio de los derechos es muy variada, sino porque es previsble que
existan desacuerdos en cada caso concreto en relacin a si la
disposicin normativa a la que nos enfrentamos constituye en realidad
una restriccin expresa de las que habla el criterio.
Por las razones anteriores, no estimo conveniente ni posible
adelantar mi posicin sobre la forma en la la que debe interpretarse
esta parte de la tesis. Sin embargo, ello no me impide sostener que al
afirmarse que se deber estar a lo que indica el texto constitucional,
ello incluye al artculo 1 constitucional y los principios que ste
contiene a efecto de interpretar las restricciones expresas al ejercicio
de los derechos humanos de forma restricitva, maximndose el mbito
protector del derecho humano en cuestin.
En cambio, s considero oportuno exponer mi postura sobre cul
puede ser la justificacin de la clusula que se introdujo a la tesis con
el apoyo de una amplia mayora de los miembros del Pleno. Al
respecto, algunos Ministros han expresado el punto de vista de que la
razn por la que cuando en la Constitucin haya una restriccin
expresa al ejercicio de los derechos humanos, se deber estar a lo
que indica el texto constitucional es en realidad porque esas
restricciones expresas son normas constitucionales que siguen
estando jerrquicamente por encima de los derechos humanos
contemplados en tratados internacionales.
De acuerdo con este punto de vista, la clusula en cuestin sera
una expresin del principio de supremacia constitucional, toda vez que
XXIII
VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
es una muestra de que la Constitucin sigue estando
en la cspide del sistema normativo, incluso por
encima de las normas de tratados internacionales que
estabelcen derechos humanos. En mi opinin, hay
buenas razones para rechazar esta visin y ofrecer, en cambio, una
justificacin alternativa del funcionamiento de las restricciones
expresas a los derechos, que por lo dems es la misma justificacin
que se utilizaba en el marco del anterior paradigma constitucional
cuando se aplicaba una restriccin constitucional expresa.
En primer lugar, si las cosas fueran como lo sostiene esta
postura, no tendra sentido decir que los derechos humanos
establecidos
en
tratados
internacionales
tienen
jerarqua
constitucional, como se sostiene en la primera tesis de la
contradiccin. En este sentido, si se asume dicha postura, el consenso
histrico sobre el rango constitucional de todos los derechos humanos
quedara reducido a letra muerta.
Sin embargo, no hay necesidad de recurrir al creiterio jerrquico
para explicar que cuando en la Constitucin haya una restriccin
expresa al ejercicio de los derechos humanos, se deber estar a lo
que indica el texto constitucional. Las restricciones expresas previstas
en la Constitucin han operado tradicionalmente como reglas
especiales o excepciones, donde la regla general est constituida por
el contenido del derecho humano.
As las cosas, considero que la justificacin del citerio introducido
en la primera tesis de la contradiccin para resolver el problema de las
restricciones debe ser la misma que operaba en el marco del anterior
paradigma constitucional: el criterio de especialidad de la norma.
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VOTO ACLARATORIO Y CONCURRENTE
CONTRADICCIN DE TESIS 293/2011
MINISTRO ARTURO ZALDVAR LELO DE LARREA
SECRETARIO GENERAL DE ACUERDOS
RAFAEL COELLO CETINA
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