La Arquitectura Moderna de Uso Colectivo en Mérida Yucatán
La Arquitectura Moderna de Uso Colectivo en Mérida Yucatán
La Arquitectura Moderna de Uso Colectivo en Mérida Yucatán
SNODO
DR. J. JESS LPEZ GARCA
DRA. CATHERINE ROSE ETTINGER MC ENULTY
DR. ROBERTO CUAUHTMOC HUERTA SANMIGUEL
DR. PABLO CHICO PONCE DE LEN
DR. ALEJANDRO ACOSTA COLLAZO
JULIO DE 2009
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RESUMEN
El objetivo de la investigacin fue poner de manifiesto los procesos modernizadores de introduccin de la arquitectura moderna de uso colectivo del siglo XX en la ciudad de Mrida y sus
resultados; los nuevos cdigos arquitectnicos empleados y los agentes modernizadores que la
posibilitaron de manera directa, en la figura de los constructores, e indirecta, mediante la participacin de los promotores ya fuera el Estado o la iniciativa privada; poniendo de manifiesto la
ideologa modernizadora que subyaci en las obras promovidas.
Los conceptos y teoras que guiaron la investigacin estuvieron centrados en el proceso de modernizacin, la transmisin de la idea de poder y de ideologa del Estado y de la clase econmica
dominante y su materializacin en la arquitectura.
La tesis puso de manifiesto el proceso de modernizacin de la ciudad de Mrida mediante la
identificacin de aspectos fundamentales como la dotacin de servicios bsicos para la ciudad;
el crecimiento de la mancha urbana y la dotacin de equipamientos, y los planes para su ordenamiento; las consecuencias de lo anterior arrojaron una modernizacin parcial y tarda, con
desigualdades en diferentes zonas de la ciudad. En relacin con la arquitectura moderna, sta se
alcanz con el desarrollo de todos los cdigos arquitectnicos, incluyendo el tcnico, hasta la
dcada de los aos sesenta. Los agentes modernizadores fueron mayoritariamente profesionales
locales que desarrollaron los cdigos arquitectnicos modernos de acuerdo con sus habilidades
personales, al margen de los promotores que los apoyaron, as fuera la iniciativa privada o el Estado. En relacin con el anlisis de lenguajes y esquemas compositivos portadores de ideologas
de poder, el resultado fue diverso, fundamentalmente por los saberes de los agentes modernizadores involucrados.
ix
ABSTRACT
The goal of the research was to highlight the modernizing processes that introduced collectiveuse modern architecture of the 20th Century to Merida, and their results; the new architectural
codes that were used and the modernizing agents that made them possible, represented directly in the form of the builders, and indirectly, through the involvement of their promoters,
whether the state or the private sector; and the modernizing ideology underlying in the works
that were developed.
The concepts and theories that guided the research were focused on the modernizing process,
the transmission of ideas of power and ideology of both the State and the ruling class and their
materialization in architecture.
The thesis highlighted the modernization process of the city of Merida through the identification
of fundamental aspects such as the city being provided with basic services and the urban area
growing and becoming equipped, and the plans for its development; the consequences of all of
these factors showed a partial, late modernization, uneven from one urban zone to the next; modern architecture was achieved through the development of every architectural code, including
the technical one, up until the 1960s. The modernizing agents were mostly local professionals
who developed the modern architectural codes according to their personal skills beyond the
developers who supported them, whether the private sector or the State. As for language analysis
and composite diagrams carrying power ideologies, results were diverse fundamentally because
of the knowledge of all modernizing agents involved.
NDICE
AGRADECIMIENTOS Y DEDICATORIA
CARTAS DE LIBERACIN
RESUMEN
ABSTRACT
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INTRODUCCIN
Formulacin del problema
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CAPTULO 1
LA MODERNIDAD ARQUITECTNICA. UN ENFOQUE TERICO
1.1 MODERNIDAD Y MODERNIZACIN
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CAPTULO 2
LA MODERNIZACION DE LA CIUDAD Y LA DOTACIN DE EQUIPAMIENTO
2.1 EXPANSIN DE LA CIUDAD DE 1900 A 1940
2.1.1 Primera modernizacin
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Ubicacin en el tiempo
Acerca de su definicin
Fases en la historia de la Modernidad
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CAPTULO 3
LOS AGENTES MODERNIZADORES
3.1 LOS PROMOTORES: ESTADO E INICIATIVA PRIVADA
3.1.1 Las polticas de desarrollo del estado de Yucatn y su materializacin en obras
Henequeneros de Yucatn
El equipamiento hospitalario para los ejidatarios henequeneros
El Hospital para Ejidatarios Veinte de Noviembre
Fomento de Yucatn
Un proyecto de urbanizacin, la colonia Mxico
Colonia Miguel Alemn
Unidad Habitacional Cordemex
3.1.2 La participacin de la iniciativa privada
3.2 LOS PROTAGONISTAS DE LA MODERNIZACIN Y LA TCNICA
3.2.1 Los constructores
3.2.2 Los nuevos materiales, sistemas constructivos y su reflejo en la arquitectura
La introduccin del block de concreto vibrado
La utilizacin del vidrio en la arquitectura moderna
3.3 LA DIFUSIN DE LA MODERNIDAD A TRAVS DE LOS MEDIOS
MASIVOS DE COMUNICACIN
3.3.1 Los bienes de consumo y su reflejo en la arquitectura
3.3.2 El discurso de los especialistas en torno a la arquitectura
y el urbanismo moderno
El arquitecto Leopoldo Tommasi Lpez y la columna
periodstica Urbansticas
La Ciudad de ayer, de hoy y de maana
El arquitecto Enrique Manero Pen, el patrimonio y otros profesionistas
3.3.3 Los mensajes caricaturizados
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CAPTULO 4
LA MODERNIZACIN ARQUITECTNICA EN GNEROS
DE IMPACTO SOCIAL Y SIMBLICO
4.1 EQUIPAMIENTO DE SALUD
4.1.1 Los hospitales al inicio del siglo XX, antecedentes al perodo de estudio
Hospital OHorn, 1906
Asilo Leandro Len Ayala, 1906
Sanatorio de La Ibrica, 1918
Sanatorio Rendn Peniche, 1919
4.1.2 El equipamiento de salud en Yucatn, dcadas cuarenta al sesenta
Hospital del Nio, 1940
Centro Anticanceroso de Mrida, 1947
Hospital para Ejidatarios Henequeneros Veinte de Noviembre, 1946
4.1.3 La dcada de la iniciativa privada, la de los aos cincuenta. La consolidacin
de los servicios mdicos
Instituto Neuropsiquitrico de Yucatn, 1954
4.1.4. Los programas federales, la dcada de 1960
Unidad Mrida del Instituto Mexicano del Seguro Social, 1962
Hospital Regional del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales
de Trabajadores del Estado (ISSSTE), 1966
Hospital con maternidad y servicio de emergencia en Progreso, Yucatn, 1962
Clnica de Mrida, 1964
4.2 EQUIPAMIENTO EDUCATIVO
4.2.1 Arquitectura escolar del Profiriato hasta la cuarta dcada
del siglo XX, antecedente al perodo de estudio
El equipamiento educativo en Yucatn de 1940 a 1970
4.2.2 La dcada de los aos cuarenta, la gnesis de un nuevo lenguaje
Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto, 1945
Escuela Primaria de la Alianza de Camioneros de Yucatn, Mrida, 1947
Escuela Primaria Albino J. Lope, 1948
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CONCLUSIONES
393
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Reflexin final
BIBLIOGRAFA
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421
441
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Publicaciones peridicas
Hemerografa
Documentos e informes
Entrevistas
Documentos en lnea
Lista de imgenes
445
464
Listado de planos
xvii
xviii
INTRODUCCIN
La llamada arquitectura moderna lleg a la ciudad de Mrida y al estado de Yucatn, como a otras
tantas ciudades del pas, despus de algunas dcadas de iniciada en el mundo y en la ciudad de
Mxico; fue a mediados de los aos cuarenta cuando los estilos propios del nacionalismo posrevolucionario, el neocolonial, neomaya y la primera modernidad del siglo XX, el art dco, que
estaban an en un momento de gran auge, y que se prolongaron hasta los inicios de la dcada
de los cincuenta, hicieron su aparicin a travs de algunos edificios de equipamiento educativo
de uso pblico promovidos por el Estado, en donde se poda advertir una serie de caractersticas
formales, espaciales, funcionales y tcnicas que diferan de lo anteriormente establecido.
Primero en Mrida, en el Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto, obra de un alto significado
colectivo y pblico por la amplitud y complejidad del programa arquitectnico, fue en donde se
puso de manifiesto una propuesta formal derivada de su funcionamiento y, como consecuencia,
una nueva expresividad y especialidad; y despus le siguieron las escuelas primarias Candelaria Ruz Patrn y lvaro Obregn en la ciudad y puerto de Progreso, con proyectos elaborados
de acuerdo con las nuevas teoras educativas imperantes desde los aos treinta en la ciudad de
Mxico, en las cuales, al igual que en el Centro Educacional, se evidenciaban formas propias de
funcionamientos y tcnicas constructivas. Fue as como se introdujo esta arquitectura al estado:
a travs de la obra pblica realizada para las colectividades.
El fenmeno arquitectnico se manifest con mayor o menor riqueza a lo largo de las dcadas
del cuarenta al sesenta, atribuible a dos condiciones principalmente: la primera en relacin directa con la promocin de obra pblica a travs de polticas gubernamentales de modernizacin
en el pas, y la segunda, con la construccin de obra privada.
En la dcada de los cuarenta fue el Estado, a travs de sus polticas en educacin, comercio y
vivienda popular, el que la introdujo mediante arquitectos locales y proyectos elaborados por las
dependencias en la ciudad de Mxico. En la dcada de los cincuenta, a finales de sta y en la
dcada de los sesenta, cobr fuerza principalmente por la aparicin de nuevos profesionales en
1
el medio, que plantearon una arquitectura en donde, a travs del dominio y experimentacin de
materiales y tcnicas, propusieron una arquitectura con una espacialidad nueva.
Sin embargo, esta condicin se dio casi exclusivamente para la obra individual, al margen de la
zona de la ciudad en donde se ubic, lo mismo se dio en el tejido histrico del centro como en
su periferia, ocasionando en consecuencia el desarrollo de reas con vocaciones de servicio;
en relacin con la construccin de la ciudad moderna concebida como aquella que presentaba un equilibrio entre sus servicios, equipamientos y reas habitacionales, fue a finales de la
dcada de los aos sesenta, con obras promovidas tanto por el Estado como por la iniciativa
privada, que confluyeron por el mismo camino, concretndose lo que desde haca varios aos
se estaba intentando.
Esta arquitectura imbuida en un ambiente modernizador, tanto en lo poltico como en lo econmico, para todos los aspectos de la vida, se constituy en aquellas manifestaciones de mayor
impacto hacia las colectividades, siendo estas obras de uso colectivo y pblico ya fuera privado o de gobierno capaces de transmitir significados simblicos y, por lo tanto, capaces de
contribuir a la creacin de lenguajes arquitectnicos, parte significativa del desarrollo cultural de
una sociedad en su colectividad.
Hoy en da, cuando esta arquitectura ya pertenece al siglo pasado y no cuenta con ningn tipo
de proteccin, y muchos de los ejemplos mencionados ya han desaparecido o se han modificado, se ha credo conveniente y necesario realizar un estudio detallado y sistemtico de los motivos que la originaron, sus cualidades, sus promotores y los que rodearon la experiencia local en
la asimilacin de la arquitectura moderna en Mrida.
El conocimiento de esta arquitectura permitir comprender integralmente todo el proceso de
desarrollo de nuestros bienes culturales para, de este modo, establecer las condiciones y legitimidad de su permanencia en los casos que sea pertinente; el registro de esta arquitectura, sus
cualidades y los motivos que la suscitaron, sin duda alguna contribuirn a conformar una memoria histrica para otras generaciones.
2
Posteriormente, durante el desarrollo de los estudios de Doctorado, se incorporaron varios trabajos que manifestaron el inters por la misma problemtica y que sin duda la han venido a
complementar con visiones diferentes.
De la historiografa del perodo moderno destaca un caso de estudio que ha sido objeto de
anlisis de varios investigadores: la colonia Miguel Alemn, el nico ejemplo de vivienda funcionalista en serie de finales de los cuarenta, construida en la ciudad de Mrida. A este caso se
le dedic casi la totalidad de uno de los nmeros de Cuadernos de Arquitectura de Yucatn,3 y
en l se exploraron mltiples aspectos de una misma temtica: su gnesis, sus transformaciones,
sus experiencias urbanas, la visin de la colonia como patrimonio cultural, sus ancdotas, tradiciones y costumbres, entre muchos aspectos. Este es el primer caso que es estudiado por varios
autores simultneamente desde diferentes pticas.
Otro trabajo importante fue el desarrollado dentro del marco del proyecto de conacyt4 Arquitectura y urbanismo de la modernizacin posrevolucionaria de la Pennsula de Yucatn, cuyo
responsable fue el doctor Marco Tulio Peraza Guzmn, y en cuyos resultados se denot una
preferencia hacia las primeras dcadas del siglo XX. Aunque se iniciaron otros estudios para las
dcadas del cuarenta al setenta, entre las temticas puntuales abordadas estuvieron los antecedentes de la planificacin en Yucatn, una clasificacin de los equipamientos de estas dcadas y
los enfoques de estudio para el perodo.
Lo anterior confirm la pertinencia y vigencia del estudio, as como la existencia de varios nichos de investigacin; algunos de ellos se desarrollaron en el presente trabajo: los procesos de
3
Para ampliar el tema vase: Cuadernos de Arquitectura de Yucatn, Nm. 18, Edicin de la Universidad Autnoma
de Yucatn, Facultad de Arquitectura, Mrida, Mxico, 2005.
4
Proyecto conacyt, Arquitectura y urbanismo de la modernizacin posrevolucionaria de la Pennsula de Yucatn. REF 44481, responsable Dr. Marco Tulio Peraza Guzmn. Los productos de dicho proyecto estn contenidos
en Cuadernos de Arquitectura de Yucatn, Nm. 17, Ediciones de la Universidad Autnoma de Yucatn, Facultad de
Arquitectura, Mrida, Mxico, 2004. Marco Tulio Peraza Guzmn (coord.) Posrevolucin y modernizacin, patrimonio
siglo XX, Ediciones de la Universidad Autnoma de Yucatn, Facultad de Arquitectura, Mrida, Mxico, 2007, y Marco
Tulio Peraza Guzmn (coord.) La memoria inmediata, patrimonio siglo XX, Ediciones de la Universidad Autnoma de
Yucatn, Facultad de Arquitectura, Mrida, Mxico, 2007.
introduccin de la modernidad arquitectnica en Mrida, los edificios de equipamiento colectivo pblicos y privados, los principales agentes modernizadores; promotores, autores y otros, y
los cdigos arquitectnicos empleados en la arquitectura moderna.
Las principales fuentes de informacin que sirvieron para el desarrollo de la investigacin provinieron de: a) peridicos, principalmente el Diario de Yucatn, de mayor circulacin en el estado y la pennsula, en donde se obtuvieron los principales acontecimientos sociales, polticos
y econmicos que se produjeron durante las dcadas de estudio relacionados con los proceso
de modernizacin; inauguraciones de obras, autores, artculos de opiniones especializadas y el
discurso modernizador; b) libros y revistas con contenidos tericos y de obras especficamente;
c) informes de gobierno de la poca, en donde se localizaron principalmente datos relativos a la
aparicin de obras, situaciones econmicas y polticas inherentes a las mismas y al momento,
as como el discurso poltico; d) gente de la poca, principalmente constructores, quienes proporcionaron sus experiencias y observaciones directas a las obras; e) lectura e interpretacin de
planos de la ciudad de distintos aos de la ciudad de Mrida.
El mtodo empleado consisti en la identificacin y el anlisis de los factores que propiciaron
la modernizacin de la arquitectura, especficamente para el gnero de equipamiento colectivo
pblico y privado, en dos niveles, urbano y arquitectnico; as como la identificacin del discurso emitido fundamentalmente en la prensa, publicaciones de la poca e informes de gobierno,
que fueron coadyuvantes en el ambiente modernizador de la ciudad, las obras y la vida en general; en ellos se analiz la congruencia de lo expresado y lo realizado. En el plano urbano se
identificaron y analizaron: a) los aspectos modernizadores de la ciudad a travs de la dotacin
de servicios de infraestructura, vas de comunicacin, servicios de agua potable, alcantarillado
y electrificacin, b) reas habitacionales y su correspondiente dotacin de equipamientos, c)
equipamientos a nivel ciudad y su relacin con la misma, y d) identificacin de polticas urbanas
y econmicas de impacto a la ciudad. En el plano de la obra en particular: a) el motivo de su
aparicin, b) el promotor, c) el autor, y d) sus caractersticas arquitectnicas.
Todos estos factores confluyeron en un solo sentido para establecer una visin global de los motivos que propiciaron la introduccin de la arquitectura colectiva moderna a la ciudad de Mrida,
los agentes que la propiciaron, los resultados que se obtuvieron, as como el entendimiento del
ambiente coadyuvante en ese sentido.
Los conceptos y teoras que condujeron la investigacin estuvieron centrados en los componentes del proceso de modernizacin, la relacin entre el espacio y el poder, la transmisin de la
idea de poder en la arquitectura, el concepto de poder y de ideologa, la ideologa del Estado y
de la clase dominante y la materializacin del poder.
La tesis est estructurada en una introduccin, cuatro captulos y conclusiones, en los que se
atendi a los aspectos tericos metodolgicos, la modernizacin de la ciudad de Mrida y la
dotacin de equipamientos colectivos, los agentes modernizadores y un anlisis desde la perspectiva del discurso y del poder en tres gneros de significado social y simblico, as como los
resultados encontrados.
El captulo uno plante el marco terico conceptual que se sigui para el desarrollo del trabajo
y los antecedentes de la arquitectura moderna en el mundo y en Mxico.
En el captulo dos, en un primer apartado, se hizo un recuento de las diferentes etapas de modernizacin de la ciudad de Mrida y posteriormente se pusieron de manifiesto y se analizaron los
aspectos que coadyuvaron a la modernizacin de la misma en las dcadas de estudio, en cuanto
a la dotacin de: a) vas de comunicacin, b) servicios indispensables para la higiene agua potable y electrificacin, c) equipamiento colectivo pblico y privado, y d) zonas habitacionales;
as como los aspectos que motivaron su aparicin y evolucin.
En el captulo tres se identificaron a los agentes modernizadores y la materializacin de sus
obras, en todas las esferas de incidencia, va: a) constructores, arquitectos e ingenieros, b) promotores, Estado o iniciativa privada, c) desarrollo y aplicacin de la ciencia y la tecnologa, materiales y nuevos sistemas constructivos, y d) la educacin como medio para cambiar actitudes y
mentalidades del hombre moderno mediante los medios de comunicacin; a travs del discurso
de los especialistas; los bienes de consumo y su reflejo en la arquitectura.
En el captulo cuatro se analizaron tres gneros de equipamiento, salud, educacin y religin; los dos primeros, por sus caractersticas de servicio e impacto social, y el religioso,
8
CAPTULO 1
LA MODERNIDAD ARQUITECTNICA. UN ENFOQUE TERICO
1.1 MODERNIDAD Y MODERNIZACIN
El tema de la Modernidad ha sido tratado por mltiples disciplinas y con diferentes enfoques. La
exactitud de sus inicios, tambin ha sido tema recurrente y variado segn la perspectiva de quien
lo ha definido, sin embargo, en todas ellas se ha encontrado algo en comn: se expresa siempre
la relacin de una poca con el pasado, la antigedad, con el fin de considerarse a s misma
como el resultado de una transicin de lo antiguo a lo nuevo. A decir de Anthony Giddens, la
Modernidad est dividida del pasado por tres discontinuidades principales: en primer lugar, el
ritmo acelerado de transformacin, caracterstica de las sociedades modernas, en segundo, por
los mltiples procesos de transformacin que llegan a ser globales, y en tercero, por la naturaleza
intrnseca de instituciones modernas, hecho inexistente en el pasado.1
Para el desarrollo de este trabajo se revisaron conceptos que conformaron la base terica del
mismo: modernizacin, el enfoque terico para su estudio, la relacin entre el espacio y el poder, la transmisin de la idea de poder en la arquitectura, el concepto de poder y de ideologa, la
ideologa del Estado y de la clase dominante, y la materializacin del poder.
Para la definicin del concepto de modernizacin se citaron a varios autores, pero fue en la definicin planteada por Carlota Sol con sus tres componentes: a) El desarrollo y la aplicacin de
ciencia y tecnologa, b) la implementacin de ciencia y tecnologa por parte de la intelligentsia
indgena, y c) el papel de la educacin, en la cual se basa este trabajo; para la caracterizacin del
perodo histrico de desarrollo de la Modernidad se utilizar lo planteado por Jorge Larrain, el
cual distingue diferentes etapas de modernizacin en Latinoamrica; para el perodo de nuestro
1 Anthony Giddens, The Consequences of Modernity, Polito Press, Cambridge, 1990, p. 6, citado por Jorge Larrain,
Identidad y Modernidad en Amrica Latina, Ocano, Ciudad de Mxico, 2004, p. 32.
11
inters se tomaron dos de ellas: la primera, de 1900 a 1950, denominada como: la crisis de la
Modernidad oligrquica y la modernizacin populista, y la segunda, que se desarroll desde la
posguerra hasta 1970, denominada como la expansin industrial.
Ubicacin en el tiempo
Habermas ha expuesto en cuanto a su acotacin en el tiempo que desde el siglo V se utiliz la
palabra latina modernus, con el fin de distinguir el presente, oficialmente cristiano, del pasado
romano pagano. A pesar de que algunos escritores han ubicado este concepto a partir del Renacimiento, la gente ya se consideraba moderna en el perodo de Carlos el Grande en el siglo
XII, as como en Francia en el siglo XVII, en la poca de la famosa discusin entre los antiguos y
modernos, por lo que nos dice el trmino (moderno) apareci y reapareci en Europa exactamente en aquellos perodos en los que se form la conciencia de una nueva poca a travs
de una relacin renovada con antiguos y siempre que la antigedad se consideraba como un
modelo a recuperar a travs de alguna clase de imitacin.2
Por su parte, Joseph Mara Montaner3 plante que la Modernidad se desarroll a partir del Renacimiento como oposicin a los valores de la tradicin medieval y tuvo su expresin en la
recuperacin del lenguaje clsico, el nacimiento de la ciencia moderna y el descubrimiento de
Amrica. Hasta ese momento el hombre empez a ser consciente de su modernidad ya que pudo
establecer una comparacin con los antiguos y establecer diferencias.
Fue en la Ilustracin y el romanticismo que se afianzaron los valores de la Modernidad. La concepcin de un universo perfecto bajo la autoridad divina perdi vigencia a medida que el mundo
se desacraliz, para surgir, a partir del siglo XVII, la razn crtica, la conciencia histrica y la idea
de progreso humano y cientfico, lo que dio pie al surgimiento del autor original en la bsqueda
2
Jurgen Habermas, La Modernidad un proyecto incompleto, en La Posmodernidad, Hall Foster et al., Cairos, Mxico, 1998, p. 19.
3
Joseph Mara Montaner, La Modernidad superada, arquitectura, arte y pensamiento del XX, segunda edicin, Gustavo Gili, S.A., Barcelona, 1997, pp. 143-144.
12
del progreso y la ruptura, de tal suerte que cambiaron los clientes del artista, del clero y nobleza
a un mercado annimo, sin el condicionante de un cliente concreto.
Acerca de su definicin
Muchos autores han definido el trmino modernidad; con el fin de tener un panorama general se
enuncian algunos de stos: Anthony Giddens afirma que la Modernidad se refiere a modos de
vida u organizacin social que surgieron en Europa alrededor del siglo XVII en adelante y que
posteriormente llegaron a tener una influencia ms o menos de carcter mundial.4 Estos modos
de vida combinaron democracias con industrialismo, educacin general con cultura de masas,
mercados mundiales con grandes organizaciones burocrticas, y se caracterizaron por su acelerado ritmo de transformacin y tendencias globalizadoras, por su reflexibilidad y por sus nuevas
instituciones. Por su parte, Baudrillard lo defini como una forma de civilizacin caracterstica
que se opone a la tradicin, es decir, a todas las otras culturas anteriores o tradicionales; frente
a la diversidad geogrfica y simblica de sta, la Modernidad se impone como una homogeneidad, irradiada mundialmente a partir de Occidente () que connota globalmente toda una
evolucin histrica y un cambio de mentalidad.5 De estas definiciones hay que destacar por un
lado su influencia de carcter mundial, a partir de Occidente, y su condicin homognea; esta
ltima entendida como el acatamiento a los modelos occidentales de produccin y consumo
bajo el que se concibe el capitalismo.
Sin embargo, fue la definicin que dio Carlota Sol la que deja explcitos todos los factores que
fueron determinantes en el proceso de modernizacin; en este sentido, plantea que la (modernizacin) podra definirse como la (rpida y masiva) aplicacin de ciencia y tecnologa basada
en la fuerza motriz de las mquinas a esferas (total o parcialmente) de la vida social (econmica,
4
Anthony Giddens, op. cit., citado por Jorge Larrain, Identidad y Modernidad p. 32.
J. Baudrillard, Voz modernite en Enciclopedia Universalis, Vol 11. Paris, Francia, S.A. 1979, citado por Fernando
Garrido Farradanes, El devenir de la Modernidad: crisis del paradigma y acercamiento a una nueva epistemologa
social, Aposta, Revista de Ciencias Sociales, Nm. 1, Oct. 2003, p. 4.
5
13
administrativa, educacional, decisiva, etc.), implementada o puesta en prctica por la intelligentsia indgena de una sociedad.6
Los elementos nuevos de esta definicin son: a) el acento puesto sobre el carcter indgena del
proceso de modernizacin (), b) el papel de un grupo social previamente desconocido, la intelligentsia, y c) el papel (revolucionario) de la educacin como un medio para llevar a trmino
las innovaciones cientficas y tecnolgicas cruciales para la modernizacin de una sociedad, as
como la formacin de las actitudes y mentalidad de los hombres (modernos).7
Ampliando estos elementos se va a considerar como: intelligentsia8 al grupo de personas de la
sociedad que se moderniza a la que llamar indgena que desarrollen habilidades propias
de una formacin intelectual, llmense profesionales, tcnicos, cientficos y expertos en general. Este grupo de individuos se encargar del desarrollo y la aplicacin de ciencia y tecnologa
previo proceso de asimilacin y puesta en prctica de los conocimientos, ya sean cientficos o
tecnolgicos, y desempean un papel muy importante en una sociedad en vas de modernizacin; la intelligentsia debe tener el respaldo de otros grupos sociales y polticos, ya sea gobierno,
lderes, lites nacionales, con el fin de impulsar y asegurar el funcionamiento de mtodos y tcnicas cientficas en la sociedad.
Una consecuencia de esto es la expansin de la burocracia, estos y los grupos sociales que tienen
algn poder poltico van a aparecer ceidos a la intelligentsia, es decir, el agente modernizador
por excelencia.
Hay que aclarar que aunque el desarrollo y aplicacin de la ciencia y la tecnologa a la vida prctica del hombre en la sociedad es fundamental para su modernizacin, no implica automticamente
6
Carlota Sol, Modernidad y modernizacin, Universidad Autnoma Metropolitana, Ciudad de Mxico, 1998,
p. 199.
7
Idem.
8
El empleo del trmino y concepto de intelligentsia procede de Rusia. Al principio se refera a los intelectuales.
Despus de la Revolucin Rusa se ha aplicado a un estrato social compuesto por profesionales cuyo trabajo es primordialmente intelectual. Helmut Schoeck, Diccionario de Sociologa, Editorial Herder, Barcelona, 1973, p. 403, citado
por Carlota Sol, op. cit., p.193.
14
Guillermo Bonfil Batalla, Lo propio y lo ajeno. Una aproximacin al problema del control cultural, en Revista
Mexicana de Ciencias Polticas y Sociales, Nm. 102, Universidad Autnoma de Mxico, Ciudad de Mxico, 1981,
pp. 183-191.
10
Idem. El autor plantea considerar las relaciones entre los elementos culturales (materiales, de organizacin, de
conocimiento, simblicos y emotivos) y las decisiones (propias o ajenas), define cuatro tipos de cultura: La autnoma,
cuando el grupo social posee el poder de decisin sobre sus propios elementos culturales; la impuesta, ni los elementos ni las decisiones involucradas son propias del grupo social; la apropiada, donde los elementos culturales son
ajenos su produccin y (o) reproduccin no estn bajo el control cultural del grupo pero los usa y decide sobre
ellos; y la enajenada, cuando los elementos culturales son propios, pero la decisin sobre ellos es expropiada. El autor
plantea que el control cultural puede tener diferentes grados y que posee una dinmica, expresada en cuatro procesos
bsicos: resistencia de la cultura autnoma; imposicin de la cultura ajena; apropiacin de elementos de esta ltima,
y la enajenacin por prdida del control sobre los elementos propios.
La cultura propia sera la conformada por la cultura autnoma y la cultura apropiada. A partir de ella se ejerce la inventiva, la innovacin, la creatividad cultural. Cultura propia (...) capacidad social de produccin de cultura autnoma
(...) La identidad contrastante, inherente a toda sociedad culturalmente diferenciada, descansa (...) en ese reducto de
cultura propia. Dentro de la cultura propia, el mbito de la cultura autnoma desempea un papel preponderante,
porque sin ella ni siquiera sera dable el proceso de apropiacin... y, precisamente el dinamismo de los procesos de
control hace posible que elementos de la cultura apropiada pasen a formar parte de la autnoma, cuando el grupo
adquiere la capacidad para producirlos y reproducirlos y no se limita a controlar su uso.
15
las imponen (lites nacionales, gobierno) y quienes aceptan (grupo social de profesionales,
tcnicos etc., o sea la intelligentsia) la modernizacin como objetivo; en este sentido la puesta
en uso de mtodos cientficos y tcnicas debe tener una aceptacin por parte de algunos de los
integrantes de una sociedad.11
Agrega a este respecto, que las nociones de racionalizacin y secularizacin son centrales en su
definicin, ya que ellas sern las que conformarn la mentalidad del hombre moderno e impulsarn el desarrollo de la ciencia y la tecnologa en trminos de una mayor eficacia en las esferas
de la sociedad. Entendidos stos como la manera ms eficiente en el sentido racional de un mayor conocimiento y habilidad en la bsqueda de los procedimientos convenientes para un fin, y
secular, en el sentido de estar exento de intereses sobrenaturales.
Para llegar a su definicin de modernidad, Carlota Sol, por un lado, analiza tres presupuestos
que frecuentemente estn presentes en los estudios ms caractersticos de modernizacin: relativismo, endogenismo y etnocentrismo; y por otro lado, enfoca su anlisis desde otros puntos
de vista: el funcionalista, antropolgico y marxista, los cuales ninguno de esos elude los tres
conceptos anteriormente mencionados, y que en conjunto aportan elementos para su definicin
de Modernidad.
Se refiere a las crticas siguientes: a) Relativismo; entendido como algo vago en el sentido de
implicar ambigedad, deficiencia que se deriva de la frecuente comparacin de modernizacin
con los procesos de industrializacin y/o urbanizacin. b) Endogenismo;12 ste presupone procesos de cambio en lo interno debido a tensiones internas a la sociedad cambiante; deriva del
modelo llamado por R. Bendix, antes-y-despus, que tiene como segunda dimensin el ser de
11
12
16
Marshal Berman, All that is Solid Melts into Air, Verso, London, 1982, pp. 16-17, citado por Jorge Larrain, Identidad y Modernidad en Amrica Latina..., p. 32.
17
un lenguaje apropiado para externar una nueva realidad que no es comprensible an. La segunda
fase se da con el inicio de la ola revolucionaria de fines del siglo XVIII y se prolonga todo el siglo
XIX. En esta poca el europeo participa de la experiencia de vivir en una poca nueva y revolucionaria. La idea de la Modernidad se formula de manera absoluta con el discurso ilustrado del
siglo XVIII, que destaca las nuevas ideas de ciencia, progreso y razn.14 La tercera fase en el siglo
XX es aquella que ve la propagacin de los procesos modernizadores en todo el orbe, trayendo en
consecuencia el desarrollo de una conciencia universal sobre Modernidad.
Por su parte, Jorge Larrain distingue cinco etapas en la trayectoria de Latinoamrica hacia la
Modernidad: a) La Modernidad oligrquica, 1810-1900, b) El fin de la Modernidad oligrquica,
1900-1950, c) La expansin de la posguerra, 1950-1970, d) Las dictaduras y la dcada perdida,
1970-1990, y e) La etapa neoliberal: de 1990 en adelante, de las cuales podemos ubicar nuestro
estudio en dos de ellas ubicadas de 1900 a 1970, las que denomina como: el fin de la Modernidad oligrquica y la expansin de la posguerra.
De manera ms exacta, este estudio se ubica en la segunda etapa a la que el autor denomina la
expansin de la posguerra, sin embargo, es en la etapa del fin de la Modernidad oligrquica en
la que se dan sus antecedentes, gnesis y desarrollo, motivo por el cual tambin se describe.
La etapa del fin de la Modernidad oligrquica, de 1900 a 1950, se caracteriz por la crisis de la
Modernidad oligrquica y la modernizacin populista; en sta se dio un reflejo de la crisis de la
Modernidad europea, con consecuencias puntuales en Amrica Latina, inicindose la cada del
poder oligrquico para emerger como de primer orden la cuestin social; hubo un surgimiento de nuevos regmenes populistas que incorporaron a las clases medias y ampliaron el derecho
al voto, y se dio un inicio en el proceso de industrializacin sustitutiva de importaciones. Fue
cuando el sistema oligrquico y aristocrtico predominante, orientado hacia la exportacin,
inici su fase terminal y se dio inicio a una industrializacin incipiente. En tanto, en Europa
se empezaba a sentir una crisis del industrialismo liberal y el industrialismo burgus puso fin a
la dominacin aristocrtica. En Amrica Latina la industrializacin llegara despus del fin del
14
Stuart Hall et al., Modernity and its Futures, Polito Press and Open University, Cambridge, 1992, p. 2.
18
Otro autor, Ulric Beck, propone que la sociedad de riesgo, o RisiKogesellschaft, es la ltima fase en el continuum o camino hacia la nueva Modernidad y distingue tres fases, premodernidad, la que correspondera a la
sociedad preindustrial; modernidad simple, la que compete a la sociedad industrial; y la modernidad reflexiva, a la
sociedad industrial actual, a la cual nombra como sociedad de riesgo; de lo anterior, se puede ubicar este estudio,
en la fase denominada como modernidad simple. Citado por J. Jess Lpez Garca, Arquitectura de Aguascalientes.
La primera mitad del siglo XX, tesis doctoral, Programa Interinstitucional de Doctorado en Arquitectura, Universidad
de Colima, 2005, p. 44.
16
Peter Wagner, A Sociology of Modernity, Liberty and Discipline, Routledge, London, 1994, p. 119, citado por
Jorge Larrain, Identidad y Modernidad, p. 41.
17
Ibid. p. 36.
19
Vase, por ejemplo, C. Offe, Disorganized Capitalism, Polito Press, Cambridge, 1987; y J. Urry y S. Lash, The
End of Organized Capitalism, Polito Cambridge, 1987, citado por Jorge Larrain, Identidad y Modernidad en Amrica
Latina..., p. 36.
20
Hablar del poder en arquitectura implica analizarla como hecho fenomenolgico; considerar el
uso del lenguaje artstico como transmisor ideolgico; la eleccin de los materiales y tcnicas
constructivas, por su valor o por su simbolismo; los esquemas compositivos como forjadores
de conductas. Indagar cules son las estrategias para conseguir los objetivos, estudiar qu la
distingue o identifica como perteneciente a una tipologa, a una institucin o estirpe familiar, y
ahondar en las posibles diferencias entre los lenguajes utilizados por el poder poltico y el poder
econmico, son los aspectos que se abordarn en el estudio.
La arquitectura est cargada de smbolos, asignados por las diferentes instituciones sociales,
las cuales a travs de su funcionamiento refuerzan valores y significados compartidos en los
que vive el sujeto, sin embargo, ms all de esto, hay una lucha de clases y grupos sociales
an por definir una visin del mundo;19 esta lucha, propiamente simblica, dar cuenta del
poder simblico definido como el poder de construir el dato a travs del enunciado, de hacer
ver y creer, de confirmar o transformar la visin del mundo y, mediante eso, la accin sobre
el mundo.20 Desde esta perspectiva ser entonces el poder que asignar propiamente los significados a las distintas arquitecturas dependiendo de la institucin, grupo social o individuo
que las crearon.
La significacin del edificio debido a la funcin que cumple, su emplazamiento y conexin
con el entorno construido o natural, su conformacin formal, dimensiones y destino, entre otras
cosas, son los aspectos que movieron a los dueos y patrocinadores en mayor o menor grado a
destinar recursos para dejar memoria de sus actuaciones, las cuales reflejarn por una parte la
ideologa de los gobernantes del momento, el Estado mexicano, artfice del Mxico moderno a
19
Luciano Literas, Poder simblico y realidad social, Revista Crtica de Ciencias Sociales y Jurdicas, Nmadas
10, p. 2, direccin en lnea: http://www.ucm.es/info/nomadas/10/literas.pdf. Consultada el 6 de diciembre de 2005,
21:00 horas.
20
Pierre Bourdieu, Poder, derecho y clases sociales, Ed. Descle, Bilbao, 2000, p. 98, citado en Literas, Luciano, op. cit.
21
travs de sus instituciones, y sus obras, y, por otra, la imagen del hombre de su tiempo, producto
del ambiente modernizador imperante, agentes del desarrollo econmico y cultural, que el estatus que la clase econmicamente dominante demandaba.
Al respecto, Paul Claval plantea el poder como un fenmeno central en la organizacin social,
ligado a la dimensin de las sociedades en donde existe la competencia por los bienes y por el
prestigio. Este fenmeno se da en todas las civilizaciones, aunque se presenta de manera diferente: si se trata de clulas pequeas se va a manifestar ms por una conciencia poltica aguda que
por una estructuracin general, y si se trata de sociedades extensas y numerosas, slo va a ser
posible encontrar un equilibrio mediante la instauracin de instituciones, que van a ser las que
establezcan los lmites y las maneras de intercambio del poder.21
Para la difusin de la ideologa sern estas instituciones las encargadas de tal tarea, ya que la influencia ideolgica no puede ejercerse a menos que se haga un esfuerzo de difusin de los temas
de la filosofa social. Un medio efectivo para la propagacin de las ideologas es la escritura, sin embargo, son los mass media los que transforman la situacin: ya que se establece un contacto directo
entre quien propone los temas nuevos y el vulgo. Nada de sorprendente tiene que las sociedades
contemporneas vean prosperar las formas ms diversas de propaganda a travs de estos medios.22
Por su parte, Heide Berndt plantea que para cualquier institucin la adhesin emotiva es lo que
cuenta como ncleo de la comunicacin. Por lo que las dominaciones ideolgicas a travs de la
comunicacin estarn cargadas de smbolos.23
Lo simblico
En su acepcin ms obvia y convencional, se puede considerar lo simblico como la de marca
visible, que ocupa el lugar de invisibles estructuras dotadas de sentido, y representan, ante todo,
21
Paul Claval, Espacio y poder, Fondo de Cultura Econmica, Ciudad de Mxico, 1982, p. 19.
Ibidem. p. 38.
23
Heide Berndt et al. La arquitectura como ideologa, Nueva Visin, Buenos Aires, 1974, p. 74.
22
22
las siguientes caractersticas distintivas: formaciones que representan objetos que estn en relacin con ellos pero son distinguibles de ellos; que dependen de estos objetos y viceversa pero
constituyen entendidas autnomas. En el gnero de la representacin artstica: A cada smbolo
compete la formulacin lgica o conceptualizacin de aquello que se comunica.24
Langer plantea las impresiones visuales como el modo especfico de comunicacin de la arquitectura, la que defini como () una ilusin; algo puramente imaginario y conceptual, traducido en impresiones visuales,25 de las que ser el smbolo y el concepto lo que en realidad va
a comunicar,26 sin embargo, una de las causas ms susceptibles de confusin proviene de creer
que el simbolismo de las obras arquitectnicas deriva en medida preponderante si no exclusiva de la determinacin de sus fines, o sea del destino inherente al edificio. Naturalmente,
el significado resultante de una funcin conectada al edificio tiene su importancia para la configuracin del conjunto de su concepcin simblica, no obstante, se trata algunas veces de un
aspecto solamente exterior y dbilmente fijado. De todos modos los procesos de simbolizacin
intencional y conscientemente conducidos son siempre muy superficiales,27 aunque tambin se
puede dar en el hombre que las imgenes, pensamientos y conceptos que representan una situacin, reaparezcan a pesar de que ningn estmulo exterior las actualice.28
En esto est implcito que el concepto de modernizacin alude a su condicin etnocntrica, que,
como plantea Carlota Sol, se da una identidad entre modernizacin y occidentalizacin, es decir, se copia del Occidente.29 En congruencia con esta autora, Fernando Ferrandanes plantea que
la modernizacin no sera otra cosa que el etnocentrismo expansivo de la sociedad occidental,
24
23
que recurre a la modernizacin del mismo modo que a lo largo de la historia se sirvi de evangelizacin y de la civilizacin para legitimar sus propsitos de conquistar y de explotacin.30
Al respecto, Carlota Sol afirma que la condicin etnocntrica conlleva a connotaciones
ideolgicas,31 lo que a su vez Fernando Ferrandes afirma que sta es la ideologa32 que esconde
la palabra modernizacin.33
30
Fernando Garrido Ferradanes, El devenir de la Modernidad: crisis del paradigma y acercamiento a una nueva
epistemologa social, en Agosta, Revista de Ciencias Sociales, Nm. 1, 2003, p. 5.
31
Carlota Sol, op. cit.
32
Este autor cita la definicin de Giddens: el concepto de ideologa est estrechamente relacionado con el de
poder, puesto que los sistemas ideolgicos sirven para legitimar el poder diferencial que mantienen los grupos.
33
Fernando Garrido Ferradanes, op. cit., p.5
34
Andrs Troncoso M., Espacio y poder, Boletn de la Sociedad Chilena de Arqueologa, Nm. 32, 2001, p. 10.
35
Idem.
24
A partir de la idea de que las clases dominantes inducen un modo de pensar dentro de una sociedad, Hobsbawn agrega que, adems de esta condicin, normalmente el estado legitimar
el orden social controlando el conflicto de clases dentro de un marco estable de instituciones y
valores, colocndose de modo ostensible por encima y fuera de ellos.36
La nocin de poder anteriormente planteada se remite eminentemente a acciones coercitivas de
dominacin y represin, sin embargo, Foucault plantea que el poder no necesariamente tiene
una funcin opresora y negativa sino que es generador de conocimientos y realidades, por lo
que el poder estar vinculado al saber, no basta con decir que el poder tiene necesidad de este
o aquel descubrimiento, de esta o aquella forma de saber, sino que ejercer el poder crea objetos
de saber, los hace emerger, acumula informaciones, las utiliza.37
Foucault plantea las siguientes caractersticas del poder: a) las relaciones de poder sirven en tanto puedan ser utilizadas en sus estrategias; b) no hay relaciones de poder sin resistencia, y c) el
poder no es slo represivo, ste es tambin productivo y positivo,38 por tanto, lo que hace que
el poder agarre, que se le acepte, es simplemente que no pesa solamente como una fuerza que
dice que no, sino que de hecho va ms all, produce cosas, induce placer, forma saber, produce
discursos; es preciso considerarlo como una red productiva que atraviesa todo el cuerpo social
ms que como una instancia negativa que tiene como funcin reprimir.39
El poder no se obtiene, se da, o se cambia, se ejerce desde diferentes perspectivas y en situaciones distintas, va en ambos sentidos de dominados a dominantes y viceversa;40 las relaciones de
poder son intrnsecas a otras relaciones, ya sean productivas, familiares etc., por lo que el poder
es omnipresente.41 En consecuencia, todo poder es intencional, siempre est cruzado por una
serie de objetivos.42
36
E. Hobsbawn, Sobre la Historia, Editorial Crtica, Barcelona, 1998, citado por Andrs Troncoso M., op.cit. p. 10.
Michel Foucault, Microfsica del poder, Ediciones La Piqueta, Madrid, 1992, p. 99.
38
Michel Foucault, Un dilogo sobre el poder y otras conversaciones, Alianza Editorial, Madrid, 2004, p. 97.
39
Michel Foucault, Microfsica del poder, p. 179.
40
Ibid., p. 135.
41
Michel Foucault, Un dilogo sobre el poder y otras, p. 97.
42
Andrs Troncoso M., Espacio y, p. 10.
37
25
A partir de los estudios de Andrs Troncoso arma una definicin del sistema de saber-poder: A
partir de su accin, el sistema de saber-poder desarrolla un conjunto de tecnologas de produccin social, constituyendo una cierta forma de sujetos, discursos, campos de saber, prcticas y
espacios de experimentacin.43
En relacin con el concepto de ideologa, V. A. Yadov define tres rasgos que la caracterizan: a) La
ideologa refleja las relaciones econmicas de la sociedad, de manera compleja y meditica, b)
la ideologa expresa intereses y necesidades fundamentales, desde la consideracin de la realidad de los diferentes grupos y clases sociales en una sociedad dividida en clases, c) la ideologa
refleja los intereses de clases en forma de ideas polticas, jurdicas, religiosas y filosficas, de
manera terica sistematizada y generalizada.44
As, podemos conceptualizarla como el reflejo del ser social, sustentada en una base econmica,
poltica y terica; reflejo de la situacin histrica y las tradiciones culturales, nacionales y de clase, tanto de las diferentes capas sociales como de los pases vecinos; influencias que le imprimen
un color especial a la ideologa de que se trate. La ideologa no es pura, se constituye como una
forma especfica de la actividad espiritual de la sociedad, que se caracteriza por la unin de los
tres rasgos antes citados. En pocas palabras, se puede definir como la autoconciencia terica de
clase. Desde la perspectiva de los socilogos burgueses la ideologa es subjetiva ya que tiene un
carcter de clase.45
De Marrais seala que la ideologa presenta dos dimensiones, en cuanto que tiene, por una parte,
una realidad en lo ideacional de las sociedades, y por otra, una realidad material que la hace ser
simblicamente eficaz,46 es en este mbito en donde la construccin del espacio arquitectnico
43
26
tiene su mayor relevancia, el xito de este simbolismo depender de que el discurso ideolgico
sea eficientemente trasmitido, de tal modo que su recepcin, aceptacin y entendimiento llegue
a la personas a las cuales fue dirigido.47
Yadov seala el proceso de formacin de la opinin pblica como una de las ms elocuentes acciones mutuas entre la ideologa y la conciencia social. Un papel no menos importante lo tendr
el proceso de propaganda ideolgica.48 En este sentido ser fundamental poner de manifiesto la
ideologa que subyace detrs del poder poltico del perodo de estudio y del poder econmico,
as como la propaganda ideolgica de los sistemas saber-poder que se generaron.
Consecuentemente con lo planteado, se propone el concepto amplio de ideologa propuesto por
Troncoso, el cual se enfoca a entender que toda idea, discurso y tecnologa social desarrollada por un sistema de saber-poder es en s ideolgica, en cuanto en ella se promueve la reproduccin de una cierta forma de ser y estar en el mundo, situacin fenomnica que puede en s misma
ser discutida desde los lineamientos que entrega en su amplitud el sistema de saber-poder.49
T. Asad, Anthropology and the Analysis. Man (n.s), 14 (4): 607-627, citado por Andrs Troncoso M, Espacio
y, p. 14.
48
V. A. Yadov, La Ideologa como forma, p. 87.
49
Andrs Troncoso, op.cit., p. 14.
27
las rivalidades y competencia interestatal, entre lites, en busca de poder y prestigio, en donde
la manera como se introduce la revolucin cientfica en una comunidad y su difusin sern relevantes para entender sus efectos.
Estos mecanismos mediadores son: por un lado el institucional, y por el otro, aquel que refleja la
estructura de los intereses de grupo y estilo de vida en la comunidad, o sea la intelligentsia, los
profesionales y los intelectuales.50
Para el anlisis de la ideologa de la clase social econmicamente dominante, caracterizada
como uno de los agentes de desarrollo de la regin, ser indispensable ahondar en los procesos
de modernizacin en los que se vieron inmersos, en el sentido ms amplio de su definicin,
tomando en cuenta los tres componentes que Carlota Sol plantea: el desarrollo y la aplicacin
de ciencia y tecnologa, la implementacin de ciencia y tecnologa por parte de la intelligentsia
indgena, y el papel de la educacin.51
Respecto de la ideologa del Estado, Yadov seala que en el perodo de las revoluciones democrtico-burguesas, la ideologa de las capas sociales de oposicin se muestra con un carcter de
universalidad, con el fin de borrar las diferencias y contradicciones de clase. En esencia, cada
nueva clase que pasa a ocupar el puesto de la que domin antes de ella se ve obligada, para poder sacar adelante los fines que persigue, a presentar su propio inters como el inters comn de
todos los miembros de la sociedad52 En pocas de revolucin esta clase se conduce como el
vocero de los intereses de todas las capas de oposicin. Es la que puede despertar el entusiasmo
revolucionario de las masas populares.
Al desarrollarse posteriormente los antagonismos de clase, los grupos dirigentes propagan premeditadamente la versin de que su ideologa es la nica verdadera y nacional, que en realidad
ni es la nica ni es universal, sino sencillamente la ideologa de la clase dominante.
50
28
Tal es el caso del Estado mexicano, del cual se tendr que tener una visin clara de la ideologa
de los dirigentes que condujeron hacia el Mxico moderno de los aos de estudio.
29
Paul Claval, Espacio y poder, Fondo de Cultura Econmica, Ciudad de Mxico, 1982, citado por Jos Palacios Ramrez, Centros comerciales, metforas urbanas y controles sociales, Revista de Antropologa Experimental,
Nm. 4, Jan, Espaa, pp. 1-12.
30
sociales y les reconoce cuotas de poder distintas. Aqu, ciertamente, hay un planteamiento ideolgico.
No solamente clases poderosas y clases sin poder, sino tambin lo pblico y lo privado, lo individual y
lo colectivo, lo masculino y lo femenino, lo joven y lo viejo, pueden ser relaciones de poder que tienen
manifestaciones espaciales.58
Al respecto de la utilizacin del concepto de ideologa, el mismo autor advierte del hecho de que
sta no se va directamente sobre la indagacin de la verdad, como s ocurre en los estudios histricos. En el mbito cientfico, la ideologa se presenta como el elemento de ratificacin de las
teoras utilizadas y el riesgo es que al utilizar una teora, se asuma una ideologa, en concordancia con lo expuesto por Foucault cuando apunta la dificultad de utilizar la nocin de ideologa ya
que, se quiera o no, est siempre en una posicin respecto de lo que sera la verdad, lo que lleva
a plantear que los discursos no son en s ni verdaderos ni falsos, el pensar en ese algo de manera
subjetiva y reconocer que la ideologa siempre estar en segundo trmino respecto de algo que
deba funcionar para ella como infraestructura, o determinante econmico.
1.3 EL CONTEXTO
1.3.1 La arquitectura moderna
La intencin de estos antecedentes no fue realizar una resea exhaustiva del movimiento moderno internacional, ni de la arquitectura moderna en Mxico, sino proporcionar un marco general
de referencia para la arquitectura estudiada.
La arquitectura moderna tuvo sus orgenes a finales del siglo XIX en Europa y en Estados Unidos
con la llamada Revolucin Industrial; con el aumento de poblacin y migracin del campo a la
ciudad, y como resultado de estas demandas industriales, se peda la construccin de vivienda
para obreros, as como de edificios pblicos de diversos gneros, en mayor nmero y mayor
tamao. En funcin de estas necesidades, el arte de construir se transform y el acero, cristal,
concreto y el aluminio sirvieron de mediadores en esta transformacin; la arquitectura busc
58
Pedro Almeida, Sociologa urbana e ideologa en Revista Sumarios, Nm. 113, ao 10, Buenos Aires, 1987, p. 10.
31
expresiones ms acordes con los cambios que se estaban viviendo, decidiendo romper con el
pasado historicista y producir una arquitectura ms funcional y menos ornamental.59
Las circunstancias que se vivan en los primeros aos del siglo XX alentaban a la negacin de
conceptos propios de las sociedades de la preguerra e indujeron en el campo de la arquitectura
a la integracin en obras concretas de teoras visuales, ideas y aportes tcnicos que se venan
germinando ya desde el siglo XIX; fue as como aparecieron las primeras obras de la revolucin
arquitectnica en Alemania, Holanda y Francia, a lo que los historiadores llaman indistintamente
racionalismo, funcionalismo, estilo internacional y otros calificativos.60
Varios autores, arquitectos o crticos, han sintetizado las razones que dieron origen a esta arquitectura, entre ellos Bruno Zevi, quien plante en cuatro aspectos los motivos que le dieron origen:
la evolucin del gusto, regido por las exigencias progresistas; el progreso cientfico y tcnico; las
nuevas teoras de la visin esttica, considerando los ismos relacionados con la creacin arquitectnica: cubismo, expresionismo, neoplasticismo, purismo y futurismo; y la transformacin
social en donde el hecho econmico jug el papel principal.61
Por su parte, Walter Gropius destac dos caractersticas sobresalientes de la nueva arquitectura: la racionalizacin, en su papel purificador, y la satisfaccin del alma humana, aspecto tan
importante como el material. El despojo de la ornamentacin, el nfasis en las funciones de
sus elementos estructurales y la bsqueda de soluciones concisas y econmicas eran tan solo
el aspecto material de su proceso formalizador, del cual dependa el valor prctico de la nueva
arquitectura; siendo mucho ms importante que la economa estructural y su nfasis funcional,
una nueva visin espacial producto de la realizacin intelectual.62
59
Nikolaus Pevsner et al., Los orgenes de la arquitectura moderna y del diseo, Coleccin Visual, Gustavo Gili,
Barcelona, 1968, pp. 9-43.
60
Enrique Yez, Arquitectura, teora diseo, contexto, Limusa, Ciudad de Mxico, 1990, p. 161.
61
Bruno Zevi, Espacios de la arquitectura moderna, Poseidn, Barcelona, 1980, pp. 175-194.
62
Walter Gropius, Alcances de la arquitectura integral, 4 ed., Coleccin Perspectivas del Mundo, Gustavo Gili,
Buenos Aires, 1959, p. 82.
32
Para lograr esta nueva visin espacial, se creaba la ilusin del movimiento por medio de la utilizacin de grandes aberturas y paos de cristal sin divisin alguna, de modo tal que se podan
convertir partes del espacio exterior en partes de la composicin arquitectnica total, producindose la ilusin de una continuidad espacial en la que la composicin no se detena en las
paredes, como en el pasado. Esta nueva relacin de espacios interiores e infinitas extensiones
exteriores era una nueva caracterstica de la arquitectura moderna.63 Respecto de la racionalizacin, Gropius aadi que sta deba adecuarse al significado de la palabra racionalizacin,
que significa, conforme la razn, por lo que implicaba consideraciones no slo de ndole econmicas sino tambin y principalmente razones de ndole psicolgica y sociolgica, siendo la
economa un medio para llegar a un fin y no slo un fin.64
La nueva arquitectura fue y ha sido nombrada de muy diversas maneras; sin embargo, estas
denominaciones han dependido fundamentalmente de las tendencias en las que sus autores se
desarrollaron. Para el presente trabajo se denominar a la arquitectura de ese perodo de la historia del siglo XX como la Arquitectura del Movimiento Moderno o Arquitectura Moderna. Se ha
sealado con otro nombre cuando ha sido pertinente, de acuerdo con las tendencias que esta
arquitectura present, ya sea funcionalismo, racionalismo, orgnica o estilo internacional.
En el mbito norteamericano se gener el nombre de arquitectura orgnica al desarrollo de la
arquitectura moderna por parte de uno de sus ms importantes exponentes, Frank Lloyd Wright,
vocablo que se cre a partir de uno de los principios que generaban su doctrina arquitectnica,
en la que planteaba el edificio como un hecho orgnico, a imagen de la naturaleza, esta analoga con la naturaleza surgi de considerar a la arquitectura como un ser vivo en donde todo
responde a una funcin.65
En el mbito internacional europeo se gener la denominacin de funcionalismo o empirismo
a la segunda etapa del Movimiento Moderno, despus de la primera guerra mundial, expresin
arquitectnica que continuaba los lineamientos funcionalistas o racionalistas de la dcada de
63
33
los veinte, producto de la fusin de dos tendencias: el purismo (Bauhaus, Werkbund, Neoplasticismo, Suprematismo) y el expresionismo (constructivismo, futurismo, etc.) que eran las que
dominaban la vanguardia arquitectnica en los aos veinte en una sola llamada empirismo (la
que retoma la experiencia anterior) o funcionalismo.66
Por lo anterior, se puede sintetizar que los primeros motivos que dieron origen a la arquitectura
moderna fueron: la respuesta a las demandas de una sociedad en cambio, al progreso cientfico
y tcnico, a las nuevas teoras de la visin esttica y a una evolucin en el gusto, producto de un
ambiente cultural. Y las caractersticas arquitectnicas ms representativas del Movimiento Moderno fueron las siguientes: despojo de la ornamentacin, nfasis en la tcnica estructural y en
nuevos materiales, una nueva visin espacial y la racionalizacin tanto de los aspectos de ndole
econmica como psicolgica.
66
Ivn San Martn, Medio siglo de arquitectura, historia y tendencias, Universidad Autnoma de Mxico, Facultad
de Arquitectura, Coleccin Arquitectura, Ciudad de Mxico, 1993, pp. 174,175.
67
Marisol Aja, Juan O Gorman, en Cuadernos de Arquitectura y Conservacin del Patrimonio Artstico, Nm.
22-23, INBA, Ciudad de Mxico, 1982, p. 11.
68
Enrique Yez, Arquitectura, pp. 174,175.
34
Algunas de estas ideas, entre las que se encuentra la frmula la casa es una mquina para habitar, impactaron y apresuraron a algunos profesionales de la construccin en su adaptacin a la
Modernidad, reconociendo la posibilidad de resolver al mnimo costo y con la mxima eficacia
los problemas que planteaba el albergue humano en nuestro pas, lo que en esas dcadas posrevolucionarias encajaba a la medida de las necesidades de un Estado naciente.69
De este modo se asumieron en Mxico dos posiciones principales ante el funcionalismo: la
integralista, que planteaba que el valor arquitectnico se constitua por un grupo de valores independientes entre s y establecidos jerrquicamente, del cual su introductor fue Jos Villagrn
Garca.70 Y la otra posicin, la funcionalista radical, apoyada bsicamente en la satisfaccin de
las necesidades funcionales y el ms adecuado aprovechamiento de los recursos econmicos
para la realizacin del proyecto, introducida principalmente por lvaro Aburto, Juan Legorreta y
Juan O Gorman, y posteriormente Enrique Yez.71 Esta ltima posicin imper durante la dcada de los aos treinta y contribuy a la edificacin de vivienda popular. En varios fraccionamientos, escuelas y edificios para sedes sindicales, se denomin arquitectura funcionalista a aquella
modalidad ms radical y pura en sus conceptos, verdadera ala izquierda del racionalismo en
Mxico, donde lo imperativo era resolver las necesidades arquitectnicas de las mayoras, donde
la economa era el valor sustancial del proyecto y de la realizacin de obras arquitectnicas, excluyendo del programa necesidades de carcter psicolgico, sin preocupaciones por la belleza;
en la realidad las exigencias espirituales se manifestaron en las obras funcionalistas.72
Para los aos cuarenta la tendencia integralista encabezada por Jos Villagrn Garca desplaz a
esta ltima de la escena terica y en gran medida prctica, culminando con su institucionalizacin en 1940.73
69
35
En esta dcada tuvo un papel importante la poltica econmica desarrollista, lo que origin
el establecimiento de industrias, auge en el comercio y la banca, as como en la creacin de la
riqueza, lo que de manera natural trasciende a la edificacin en general y como consecuencia
a la arquitectura; la alta burguesa empez a demandar edificios que requeran sus negocios
prsperos, y el gobierno, al incrementarse sus recursos, se vio en posibilidades de poner en
prctica programas de beneficio social; en consecuencia, existi un consenso en el medio profesional respecto del enfoque y solucin de los problemas arquitectnicos y del determinismo
esttico como esencia de la forma.74
A principios de la dcada de los cincuenta, las distintas posiciones ante la nueva arquitectura
confluiran en una sola; los arquitectos radicales atemperaron este radicalismo y reconocieron
pragmticamente el valor esttico de toda obra arquitectnica; los arquitectos recin egresados
rechazaron los preceptos acadmicos que no permitan el uso lgico de las nuevas tcnicas de
construccin, entendiendo el papel social que la arquitectura deba desempear.75
En los aos sesenta se advierte un cambio en la arquitectura mexicana, algunos arquitectos
empezaron un paulatino y selectivo abandono de algunos de los postulados de la arquitectura
moderna, por un camino que podra calificarse como un retorno a la tradicin verncula. Este
cambio coincidi en el mbito mundial con la revalorizacin de las tradiciones regionales y,
por ende, la cultura propia. Pero tambin se inici una generalizacin del llamado Estilo Internacional; de l Walter Gropius dijo que hablar de Estilo Internacional era referirse a la pobre
utilizacin de ciertos logros tcnicos universales de un perodo de determinada nacin, donde se
utilizaban esqueletos de acero u hormign armado, ventanales corridos, losas en voladizo o alas
apoyadas livianamente sobre pilares, como medios contemporneos impersonales, sin embargo,
crea que con esa materia prima, por decirlo de algn modo, era posible crear manifestaciones
arquitectnicas regionalmente distintas.76
74
36
Kenneth Frampton seal el Estilo Internacional como una modalidad cubista de arquitectura
que se extendi en todo el mundo, en la poca de la segunda guerra mundial, en la cual su
supuesta uniformidad era engaosa, ya que su forma plana desnuda era sutilmente modificada
para responder a condiciones climticas y culturales especficas. Y aadi que el Estilo Internacional nunca lleg a ser autnticamente universal, sin embargo, implicaba una universalidad de
enfoque principalmente por la aplicacin de una tecnologa de peso ligero, con la utilizacin
de materiales sintticos modernos, y partes modulares estndar que facilitaban la fabricacin
y la edificacin. En lo formal, como regla general, tenda a la flexibilidad hipottica del plano
libre y por ello prefera la construccin a base de armazn que la obra de ladrillo, lo que origin
una postura formalista en aquellos lugares donde las condiciones especficas, ya fuesen climticas, culturales o econmicas, no podan soportar la aplicacin de una tecnologa avanzada
de peso ligero.77
Estos cambios o retorno a la tradicin verncula provenan del desplazamiento de ciertos postulados y convicciones de los primeros tiempos del movimiento moderno. Esto se remita a: el
espacio concebido como un continuo, que ceda el paso al regreso de los espacios centrpetos,
estableciendo relaciones muy controladas con el exterior; la rpida renovacin de la ciudad,
premisa que alentaba a la construccin de edificios indiferentes a su entorno por una relacin
respetuosa entre el edificio nuevo y el contexto; la revalorizacin del muro como elemento plstico y organizador de espacios internos, donde la relacin con el exterior cambiaba; los espacios
interiores y exteriores, que se delimitaban claramente y surgieron de la necesidad de darle al
muro color y texturas que le imprimieran sensaciones y carcter propio; y el relativo descuido al
programa, en comparacin con la rigidez anteriormente planteada, flexibilizndolo y cediendo
a necesidades propias del edificio. Este retorno a las tradiciones vernculas se dio mediante una
muy libre serie de transgresiones, pero siempre manteniendo su filiacin moderna.78
77
Keneth Frampton, Historia crtica de la arquitectura moderna, Gustavo Gili, Ciudad de Mxico, 1983, p. 252.
Pedro Conrado Sondereguer, Memoria y utopa en la arquitectura mexicana, Universidad Autnoma Metropolitana, Unidad Azcapotzalco, Tilde, Ciudad de Mxico, 1990, pp. 26, 27.
78
37
CAPTULO 2
LA MODERNIZACIN DE LA CIUDAD, Y LA DOTACIN
DE EQUIPAMIENTO
Para comprender el significado que tuvo la aparicin del equipamiento en la ciudad, se hizo
necesario contextualizarlo en ella, ya que no es posible hablar de equipamiento si no se establecen relaciones con las reas habitacionales; el equipamiento slo tiene sentido cuando hay
zonas a quien servir, por ello el entender cmo funcionan las reas ms densas de la ciudad
que estn conformadas por la vivienda permiti concebir los procesos de introduccin de dicho
equipamiento, toda vez que los equipamientos constituyen el medio ambiente necesario para
la vivienda y los elementos alrededor de los cuales se organiza la vida de los barrios y de los
centros urbanos.1
Aunque el trabajo privilegia el anlisis particular del equipamiento considerado como
monumental,2 por el grado de significacin que tiene para la poblacin, en este captulo se sealan el equipamiento a escala de zona, toda vez que se entiende que la funcin del equipamiento
colectivo es producir integracin, o sea producir ciudad;3 el concepto de equipamiento colectivo
no slo se vincula a la representacin del hombre, sino tambin al hombre-en-la-ciudad dentro del movimiento de urbanizacin.4
Francois Fourquet y Lion Murard, Los equipamientos del poder, ciudades, territorios y equipamientos colectivos,
Gustavo Gili, Barcelona, 1978, p.136.
2
Jos Mara Montaner defini la arquitectura monumental como aquella cuyas expresiones iban ms all de lo funcional; recuperacin de la expresin y monumentalidad en donde la expresividad estaba entendida como la relacin
entre ella y la funcin; el uso especfico del edificio, ya sea pblico o privado, como la base de la belleza que la composicin puede alcanzar, como consecuencia de la tcnica y de los materiales utilizados que podan ser expresados
de manera ms o menos autntica. Joseph Mara Montaner, La modernidad superada, arquitectura, arte y pensamiento
del siglo XX, segunda edicin, Gustavo Gili, Barcelona, 1997, p.92.
3
Ibidem, p. 32.
4
Ibid., p. 130.
39
Se entendi el equipamiento colectivo como aquel que era prestado para una colectividad,
ya fuera por el Estado, o por un sector pblico cualquiera; en funcin de ello se consider
colectivo = pblico.5
El captulo se desarrolla en cuatro partes; en la primera se establecieron los antecedentes a las
diferentes etapas modernizadoras de la ciudad, y en las otras tres se desarroll el anlisis para
cada una de las dcadas de estudio: cuarenta, cincuenta y sesenta, respectivamente; en ellas se
identificaron y analizaron los aspectos coadyuvantes a la modernizacin, en cuanto a la dotacin
de vas de comunicacin; servicios indispensables para la higiene (como los proyectos de introduccin del agua potable, alcantarillado y electrificacin), el establecimiento del equipamiento
colectivo, pblico y privado, tanto en zonas establecidas como nuevas; las nuevas reas habitacionales y sus servicios, as como los planes para el ordenamiento de la ciudad y los agentes
modernizadores que lo posibilitaron.
Como antecedente al tema, se recorrern los distintos caminos que ha seguido Yucatn y especficamente la ciudad de Mrida hacia la Modernidad; si concebimos modernidad, como seala
David Harvey, como la experiencia de movilidad y transformacin social, con un sentido de
dinamismo; expresa un abrumador sentido de lo efmero, de lo fragmentario, de lo contingente
y del cambio catico,6 se entendern los tres momentos modernizadores del desarrollo de la
ciudad: el primero, que data del perodo borbnico en el siglo XVIII, llamado primera modernizacin, luego, la modernizacin del Porfiriato, de finales del siglo XIX e inicios del XX; y por
ltimo, la Modernidad del siglo XX, con el llamado perodo moderno posrevolucionario, delimitado desde la posrevolucin hasta la dcada de los aos setenta y, aunque algunos autores lo han
considerado como uno solo, ha sido posible encontrar para Yucatn tantos hechos econmicos,
polticos y fundamentalmente arquitectnicos, para plantear una diferencia entre las primeras
dcadas despus de la revolucin y los aos del 40 al 70.
Ibid., p. 148.
David Harvey, The Condition of Postmodernity, pp.10-12, citado por Jorge Larrain, Identidad y Modernidad en
Amrica Latina, Ocano, Ciudad de Mxico, pp. 33-34.
40
Aercel Espadas Medina, Mrida: la traza borbnica ltima virreinal, primera modernizacin, en Mrida, el azar
y la memoria, Coleccin de Investigacin, Gaceta Universitaria, Ediciones de la Universidad Autnoma de Yucatn,
Mrida, Mxico, 1993, p. 45.
8
Sonia Lombardo de Ruiz, La arquitectura y el urbanismo en la poca de la Ilustracin, El arte mexicano, Tomo 9:
Arte del siglo XIX, 1, SEP- Salvat, Mxico, 1986, p. 1269, citado por Aercel Espadas, Mrida, el azar, p. 50.
9
Ibidem, p. 48.
41
Entre las medidas que la administracin borbnica implement para la modernizacin de las
ciudades estaban el planeamiento y organizacin del territorio urbano a travs de la regularizacin del trazado de la ciudad, delimitacin de sus espacios libres, trazo o mejoramiento de los
paseos pblicos y reglas a la edificacin; se hizo ms expedito el comercio, diferenciando entre
vivienda y trabajo, se marc la sede del poder con claridad y se establecieron negociaciones con
los emergentes ncleos del poder mundial.
Los elementos que se emplearon para la transformacin urbana y cultural de la ciudad de Mrida
derivaron del diseo ilustrado, el modelo neoclsico, cuyo objetivo era romper la ideologa centralizadora fsica con la introduccin de elementos fsicos de equipamiento y servicios para los
que se vali de diversos recursos formales: a) La transformacin de la centralidad urbana: con el
propsito de debilitar la ideologa centralista eclesistica, generando nuevos polos urbanos que
a su vez generaron nuevas actividades de intercambio cultural, social y econmico; b) Creacin
de paseos, que vinieron a transformar la centralidad de la ciudad, convirtindose stos en nuevos
hitos sociales, creando el paseo de la Alameda como contrapunto en la plaza central, smbolo
del poder ideolgico; c) Introduccin de otras diversiones, como las corridas de toros y peleas de
gallos; d) Transformacin espacial de la plaza principal con la creacin de los portales de granos,
el hoy parque Eulogio Rosado, la pescadera, etc., y e) La creacin de plazas perifricas a los
cuarteles centrales: las de los barrios.10
Aercel Espadas Medina, Mrida: la traza op. cit., pp. 64, 65.
42
Roberto Ancona y Ramn Riancho, Arquitectura y urbanismo en Mrida durante el Porfiriato, en Cuadernos
de Arquitectura de Yucatn, Nm. 1, Universidad Autnoma de Yucatn, Facultad de Arquitectura, Mrida, Mxico,
1987, pp. 54-55.
12
Ibidem, p. 55.
13
Ibid., p. 92.
43
Despus de esta lucha vino uno de los perodos ms importantes en la historia local, el auge
henequenero, basado en el monocultivo y el monopolio mundial del comercio de las fibras
duras. Estas condiciones dieron a la entidad riqueza y prosperidad, asimismo, circunstancias
polticas, econmicas y sociales particulares, las que sintetiza el historiador yucateco Jaime
Orosa Daz:
El afianzamiento de la paz interna, aplicando los mtodos polticos gubernamentales establecidos por
la dictadura. La aparicin de signos de prosperidad derivados del auge del henequn, () creacin del
sistema ferrocarrilero local () obras materiales en () Mrida y en otras poblaciones. El nacimiento de
la clase econmica reducida, que no solamente control la riqueza () sino tambin el poder poltico.
() las desigualdades sociales y econmicas entre () la poblacin yucateca. (). El clima de ()
opresin poltica () que acab con las prcticas democrticas y () derechos individuales.14
14
Jaime Orosa, Porfirismo y revolucin de Yucatn, Ediciones de la Universidad de Yucatn, Mrida, Mxico, 1980,
p. 20, citado por Enrique Urzaiz Lares, La arquitectura porfiriana en Mrida, en Mrida, el azar y la memoria, Coleccin de Investigacin, Gaceta Universitaria, Universidad Autnoma de Yucatn, Mrida, Mxico, 1993, p. 102.
15
Enrique Urzaiz Lares, La arquitectura porfiriana, op. cit., p. 104.
44
A principios del siglo se observaron obras que pusieron en evidencia la tendencia de favorecer
el desarrollo hacia el norte, con nuevas colonias y repartos; en el pueblito de Itzimn el ayuntamiento realiz obras de rectificacin de calles y lo declar parte de la ciudad (1904),16 y en el
mismo ao se fund la colonia San Cosme, hoy Garca Giners.17
Gabriel Ferrer de Mendiolea, La ciudad de Mrida, captulo I, en Enciclopedia Yucatanense, tomo IV, edicin
oficial del Gobierno de Yucatn, Ciudad de Mxico, 1977, p. 521.
17
Idem.
18
Enrique Urzaiz, Panorama del patrimonio arquitectnico moderno de Yucatn (1915-1970), en Procesos territoriales de Yucatn, Universidad Autnoma de Yucatn, Facultad de Arquitectura, Mrida, Mxico, 1995, pp.131-140.
19
Idem.
20
Ana Garca y Luca Tello, Crecimiento contra desarrollo, en pp. 169-199 citado por Enrique Urzaiz en Panorama del patrimonio p. 132.
45
De la arquitectura neocolonial se tienen antecedentes desde los aos veinte, sin embargo, fue
durante las dcadas de los treinta y cuarenta en los que se desarroll esta arquitectura. La expresin de este estilo se manifest bsicamente en tres tendencias: la Neocolonial Yucateca, la Mexicana o Neobarroca y la Californiana, que se dieron principalmente en los gneros habitacional y
educativo, en el primero, como moda trada del sur de los Estados Unidos de Norteamrica, en
especial de California, y de Ciudad de Mxico; y en el gnero educativo, como inercia tarda de
la campaa nacionalista. En la construccin de vivienda residencial destac el arquitecto Carlos
Castillo Montes de Oca, quien tambin construy algunos edificios entre los que sobresale la
plaza de toros.
De la tendencia neomaya la expresin local del movimiento nacionalista indigenista estuvieron aquellas donde estaba presente la fuerza expresiva de la ornamentacin maya; en esta tendencia destacaron los arquitectos Manuel Ambilis y su hijo Max, Leopoldo Tommasi Lpez y ngel Bachini, entre otros. Se construyeron obras importantes con esta expresin formal: la Casa del
Pueblo (1926-1928), el Sanatorio Rendn Peniche (1919), edificio del Diario de Yucatn (1925), el
parque de las Amricas (1946) y el Monumento a la Patria (1945), entre las ms importantes.
La arquitectura art-dco se dio en casi todos los gneros arquitectnicos, destacando la proliferacin popular del estilo con diversas reinterpretaciones y simplificaciones. En la expresin formal,
la tendencia vertical manifestada de variadas maneras constituy el sello distintivo de este estilo
arquitectnico; el uso de materiales como el granito sobresali en pisos, escaleras y fachadas, as
como los motivos geomtricos como elementos decorativos; los materiales y sistemas constructivos utilizados fueron predominantemente el concreto armado, tanto en apoyos como en marcos
y techos. En relacin con los espacios interiores y su organizacin, iniciaron una tendencia al
funcionalismo; su fuerza se centr en el planteamiento formal.21 Entre los edificios importantes
de este estilo estn: el edificio de Seguros La Nacional (1936), la Facultad de Medicina (1952) y
el Instituto Neuropsiquitrico, del mismo ao.22 El arquitecto Enrique Urzaiz ubica todas estas
21
22
46
manifestaciones entre 1917 y 1948.23 La siguiente etapa, de la dcada de los aos cuarenta a la
dcada de los aos sesenta, es el motivo de este trabajo.
En relacin con el desarrollo de la ciudad surgieron en este perodo las colonias: Jess Carranza,
del lado oriente (1917);24 Reparto Jos Dolores Patrn (1928), con 104 casas, escuela primaria y
mercado;25 y la colonia Alcal Martn entre 1930-1940.26
Tambin se construyeron vas importantes, como la avenida Coln (1920), que comunicaba las
avenidas Paseo de Montejo e Itzaes;27 la avenida Itzaes (1923), en su tramo norte desde el parque
el Centenario;28 la avenida Cupules (1923), del Paseo de Montejo a la hacienda Tanlum;29 y la
prolongacin del Paseo de Montejo (1926).30
Se dot a la ciudad de equipamiento en todos los rubros promovidos, tanto por el Gobierno
como por la iniciativa privada. Entre ellos estuvieron: los Sanatorios La Ibrica (1918),31 y el
Rendn Peniche (1920); la estacin de ferrocarriles (1920);32 la Escuela Modelo (1926), en el
Paseo de Montejo;33 la plaza de toros (1929),34 y el Estadio Salvador Alvarado (1939),35 entre los
ms importantes.
23
Ibid., p. 70.
La Voz de la Revolucin, Mrida, Mxico, 15 septiembre de 1917.
25
Mario Rodrguez Padilla, El Reparto Jos Dolores Patrn: Un digno modelo de Casa Popular en Cuadernos
de Arquitectura de Yucatn, nm. 3, Universidad Autnoma de Yucatn, Facultad de Arquitectura, Mrida, Mxico,
1990, p. 49.
26
En 1938 se le asigna como Reparto Coln, en plano de la ciudad de Mrida, 1938.
27
La Revista de Yucatn, Mrida, Mxico, octubre de 1920.
28
Op. cit., 22 de noviembre de 1923.
29
Op. cit., 17 de septiembre de 1923.
30
Op. cit., 17 de septiembre de 1926.
31
Op. cit., 20 de octubre de 1918.
32
Gabriel Ferrer de Mendiolea, La ciudad de Mrida, captulo I, en Enciclopedia Yucatanense, tomo IV, edicin
oficial del Gobierno de Yucatn, Ciudad de Mxico, p. 521.
33
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 13 de octubre de 1926.
34
Op. cit., 27 de enero de 1929.
35
Op. cit., 1 de febrero de 1939.
24
47
Del lado poniente de la ciudad, la penitenciara y la red frrea a su costado parecen haber sido
frenos para la expansin de la ciudad hasta fines de la segunda dcada, cuando se empez a
fomentar la colonia Francisco I. Madero; San Marcial (1925); San Lorenzo (1929), y el pequeo
Reparto OHorn que se consign en el plano de 1938 y que probablemente fue proyectado en
1918 ya que se promova uno en el mismo sitio con el nombre de Colonia Penal.36 En el oriente
de la ciudad surgieron las colonias la Esperanza, Mayapn y Miraflores.37
Al sur de la ciudad aparecieron las colonias Dolores Otero (1913), la Delio Moreno Cantn y la
Sambul (1925), y la Melitn Salazar, segn el plano de 1938;38 y al sureste se traz la Vicente
Sols (1912).39 Esta ltima colonia y la Dolores Otero fueron promovidas por el seor Joaqun
Garca Giners, quien hizo lo propio con la colonia que hoy lleva sus apellidos antes San
Cosme es conveniente reconocer que despert mucho ms inters la promocin de San Cosme, que se dise con un amplio jardn, incluso la esposa del presidente Porfirio Daz puso la
primera piedra del templo de esa colonia en 1906.40
A diferencia del norte, las otras zonas de la ciudad carecieron de amplias vas de comunicacin.
La ocupacin fue muy lenta en casi todas ellas; pasaran incluso aos para levantar las primeras
casas en varias de ellas, y ms para dotarlas de servicios. De hecho, algunas se indicaron en los
planos de la ciudad luego de varios aos, hoy son ejemplo de ello las tres sealadas al oriente de
la ciudad que no aparecieron en el plano de 1920. Fig. 1
36
Fueron citadas como sigue: la Francisco I. Madero, en La Voz de la Revolucin, 11 de mayo de 1918; San Marcial, en La Voz de la Revolucin, 13 noviembre de 1918; la Colonia Penal, en La Voz de la Revolucin, 18 de octubre
de 1918.
37
La Esperanza, en La Voz de la Revolucin, 21 de agosto de 1915; Mayapn, en La Voz de la Revolucin, 21 de
abril de 1916, y Miraflores, en La Voz de la Revolucin, 13 de enero de 1916.
38
Yucatn en el Tiempo, enciclopedia alfabtica, tomo III, Dolores Otero, Ciudad de Mxico, 1998, p. 113. Florida, en La Voz de la Revolucin, 15 de septiembre 1925.
39
Idem.
40
Leopoldo Gonzlez Martn, La primera dcada del siglo XX. Arquitectura porfiriana en Mrida, en Postrevolucin
y modernizacin, patrimonio del siglo XX, coord. Marco Peraza Guzmn, Facultad de Arquitectura, Universidad Autnoma de Yucatn, Mrida, Mxico, 2007, p. 150.
48
El plano de 1949 an presenta en servicio las dos instalaciones. La pista de El Fnix fue clausurada probablemente pocos aos despus. El edificio original del aeropuerto fue sustituido por el actual en 1970.
49
no se establecan reas mnimas para lotes, y tcitamente se refera a la donacin de terrenos pblicos para equipamiento; en el artculo 27 haca referencia a la donacin de terrenos para usos
pblicos: Adems del terreno que ocupen las calzadas y calles, los dueos de los que se repartan cedern gratuitamente el terreno necesario para plazas, escuelas, mercados u otros establecimientos pblicos o municipales que en cada reparto se determinen por el H. Ayuntamiento.42
En el artculo 31 se estableca la prohibicin de algunos usos entre los cuales estaban las fbricas,
y estipulaba que:
Formado el proyecto de reparto con las condiciones establecidas, lo presentar el interesado al H.
Ayuntamiento para su aprobacin y designacin de las plazas y terrenos que haya que cederse para
usos pblicos; con cuanto ms estime conveniente la Municipalidad y sin que el proyecto sea aprobado
no podrn enajenarse solares ni se consentir ninguna clase de fbricas en ellos, bajo las penas que
establece el artculo 16.43
Lo anterior lleva a la identificacin de cuatro etapas de modernizacin para Yucatn, y especficamente para la ciudad de Mrida: la primera fue la que se dio con las transformaciones borbnicas del siglo XVIII; la segunda fue el perodo de las ltimas dcadas del siglo XIX y principios del
XX, denominado el Porfiriato, la tercera, aquella que abarc despus de la Revolucin Mexicana,
de 1915 a 1940; y la cuarta, de 1941 a 1970, esta ltima la ms representativa del movimiento
moderno en Mrida.
La caracterstica comn en los perodos anteriormente sealados es que siempre venan precedidos de un movimiento social, poltico y econmico, o sea, una transformacin en las estructuras
de la sociedad:
a) El cambio de la dinasta de los Habsburgo a la de los Borbones implic un cambio en las
polticas econmicas administrativas y, en consecuencia, un planteamiento nuevo urbano-arquitectnico.
42
Diario Oficial del Gobierno del Estado Libre y Soberano de Yucatn, Proyecto de Ordenanzas Municipales de
Construccin para la Ciudad de Mrida, Mrida, Mxico, 17 de febrero de 1919.
43
Op. cit. El artculo 16 corresponde a los reconocimientos y penas.
50
b) La modernidad del perodo del Porfiriato tuvo su origen en la revolucin industrial y el positivismo, conceptos que se ven reflejados en la modernidad de las ciudades decimonnicas.
c) Y el tercer perodo, de la modernizacin postrevolucionaria (1915-1970), como su nombre
lo indica, tendr su punto de partida despus del movimiento de la lucha armada de la
Revolucin Mexicana, y en el caso de Yucatn marc el inicio de la llegada del general
Salvador Alvarado y el final de la dcada de los setenta, caracterizada por una fuerte inversin de capital federal al estado, lo que trajo consigo el surgimiento de nuevas ramas
de actividad, el crecimiento acelerado demogrfico y un proceso de crecimiento urbano
acelerado con un cambio en la fisonoma urbana. Sin embargo, aunque la situacin en lo
poltico y econmico fueron en trminos generales unitarios para todo el perodo, destacaron algunos hechos que permiten hacer una divisin del perodo en dos, de 1915 a 1940,
y de 1940 a 1969; si bien es cierto que en el centro del pas se vivi desde la dcada de los
veinte un movimiento en donde convivieron aspectos relacionados con la bsqueda de la
identidad nacional (lo que dio lugar al neoindigenismo, neocolonial y dco como una manifestacin de Modernidad), as como de la solucin de las demandas de las necesidades
de las clases populares (vivienda en serie, equipamiento pblico, seguridad social, etc.),
fundamento del movimiento moderno. En Yucatn, dada la lejana y las condiciones econmicas del lugar, se pudieron percibir con claridad la aparicin de estas manifestaciones
en dos etapas; hasta mediados de la dcada de los cuarenta y principios de los cincuenta,
an se dieron las expresiones neomaya, neocolonial y art dco, manifestaciones que no
se liberaron del academicismo decimonnico, constituyndose ese aspecto como el criterio ms importante para esa divisin; fue a mediados y finales de la dcada de los aos
cuarenta cuando aparecieron expresiones arquitectnicas con los cdigos del movimiento
moderno (innovaciones tecnolgicas, materiales y una nueva concepcin espacial y formal en lo arquitectnico y urbano). A esto se le sum otro hecho, el modelo econmico
que se dio en Mxico en los aos de 1940 a 1970; el pas se caracteriz por un crecimiento
econmico sin desarrollo, o un crecimiento sin distribucin del ingreso, se dio lo que se ha
conocido como sustitucin de importaciones.
51
52
44
Fernando, Aguilar Mndez, La expansin territorial de las ciudades de Mxico, Universidad Autnoma Metropolitana, Ciudad de Mxico, 1992, p. 50.
53
Poblaciones en miles
Superficie en Hs
Densidad bruta
1900
46.6*
1400 (1)
33,28
1910
62.4*
1800 (2)
34,66
1921
79.2*
2000 (3)
39,6
1930
95.0*
N/D
N/D
1940
96.8*
2690*
35,98
1950
142.8**
3056**
46,73
1960
170.8**
3631**
47,04
1970
212.1**
4964**
42,73
Tabla de nmero de habitantes, superficie urbana y densidad bruta, armada por la autora a partir de
varios documentos.45
Un anlisis de los planos de la ciudad de 1920, 1938, 1941, 1944 y 1949 puso en evidencia la
aparicin de varias colonias, y se determin en principio que Mrida fue creciendo de manera
acelerada, pero esto no reflej el impacto de ser receptora de tan elevada poblacin entre 1940 y
1950; la expansin de la ciudad se dio, en casi todos los casos, con proyectos de nuevas colonias
45
* Datos que proporciona Fernando Aguilar Mndez, La expansin territorial de las ciudades de Mxico, Universidad Autnoma Metropolitana, Ciudad de Mxico, 1992, p. 59.
** Datos que proporciona Jorge Bolio Oss, Mrida y su centro histrico: una relacin conflictiva en Mrida el azar
y la memoria, Universidad Autnoma de Yucatn, Mrida, Mxico, 1993, pp.161, 162.
(1) Estimado en base el plano de 1920, Eduardo Lujn Urzaiz, Mrida el despertar de un siglo, Archivo Pedro
A. Guerra, Universidad Autnoma de Yucatn, Gobierno del Estado, 1992, p.5. No se incluy el rea de las
colonias que en 1900 no existan: Garca Giners, Itzimn, Vicente Sols, San Damin, Dolores Otero y Florida.
Fernando Aguilar indica que la superficie en 1900 fue de 1477 hectreas.
(2) Estimado en base al plano de 1920, Eduardo Lujn Urzaiz, Mrida el despertar No se incluy el rea de las
colonias que en 1910 no existan: Vicente Sols, Florida, San Damin y Dolores Otero. Jorge Bolio Oss indica
que la superficie era entonces de 1401 hectreas.
(3) Estimado en base al plano de 1920, Eduardo Lujn Urzaiz, Mrida el despertar
N/D Informacin no disponible por no contar con plano de la ciudad de1930.
54
con subdivisiones de lotes y traza de calles con nula o muy pocas construcciones. Un caso evidente lo fue la colonia San Damin, que aparece en el plano de 1920 y ms de cuarenta aos despus
alcanz una importante densidad de construccin y poblacin, con el mismo nombre. Los recursos
para financiar la urbanizacin muy probablemente resultaban muy onerosos para los particulares;
el ayuntamiento autorizaba la creacin de nuevas colonias, atendiendo a las solicitudes ya que
con seguridad cumplan los requisitos mnimos que el ayuntamiento peda y aunque estipulaba
sanciones por incumplimientos de plazos, no se dio el desarrollo esperado; tuvieron que pasar
varios aos para fomentar las construcciones y poblar dichas reas.
Algunas de las medidas que las autoridades consintieron para alentar nuevas construcciones en
ciertas avenidas y colonias, fue la de conceder exenciones de impuestos municipales por cierto
nmero de aos. Esta prctica se document en la dcada 1920-1930, para construir en lotes
que daban a las avenidas Itzaes y Cupules, y tambin en el perodo tratado.
En algunas fotos areas de la ciudad presentadas en el estudio del arquitecto Pani, se apreci la
escasa densidad de construccin que se tena para entonces; uno de los planos que se present
en el Plan Regulador de Mrida de 195346 (Fig. 3), elaborado por un grupo de profesionistas
coordinado por el arquitecto Mario Pani, mostr la densidad de construccin de la urbe e ilustr
claramente lo anteriormente mencionado; colonias como la Jess Carranza e Itzimn se indican
con nula o muy baja densidad de construccin en todas sus manzanas; se estima que casi la
mitad de la colonia Garca Giners presentaba un 20% de construccin o menos.
No fue posible establecer las diferencias y tendencias de densidad de construccin porque no se
pudieron encontrar planos con informacin para las dcadas siguientes. Al parecer, como se vera
ms adelante, el comportamiento del incremento de la densidad de construccin de los aos cincuenta, expandindose del centro a los barrios antiguos y muy poco en las colonias perifricas,
se mantuvo hasta cerca de los setenta, cuando la vivienda masiva de nuevos fraccionamientos
fue notoria.
46
Mario Pani, et al., Estudios de planificacin sobre Yucatn, sobretiro de Revista Arquitectura Mxico, Nm. 42,
Mxico, s/f.
55
En este trabajo se analiz el proceso de urbanizacin que se dio en el perodo de estudio; se crey conveniente dividirlo por dcadas, aunque varios hechos que se describen se traslapan entre
s con las dcadas contiguas.
Para el anlisis de cada una de las dcadas estudiadas se registraron y analizaron los diferentes
hechos tendentes a la modernizacin tanto de la ciudad como de la arquitectura, en sus diferentes
escalas y mbitos: a) los procesos, ya sea de ndole poltica, social o econmica que tendieron a
la modernizacin de la ciudad y de la arquitectura, b) a nivel ciudad en su extensin producto de
la anexin de nuevos fraccionamientos, las caractersticas de las nuevas trazas; el equipamiento
y servicios proporcionados en ellos y la fisonoma de los nuevos conjuntos habitacionales; c) la
aparicin del equipamiento a nivel ciudad, los cambios urbanos ms importantes, el lenguaje
formal propuesto, y d) las transformaciones en el centro de la ciudad, y e) la identificacin de
promotores y constructores.
47
Gabriel, Ferrer de Mendiolea La ciudad de Mrida, captulo I, en Enciclopedia Yucatanense, tomo IV, edicin
oficial del Gobierno de Yucatn, Ciudad de Mxico, 1977, p. 521.
56
El surgimiento de colonias en la periferia de la ciudad, varias con los nombres de sus fraccionadores, carecan notablemente de infraestructura y equipamiento; tales condiciones fueron permitidas por diversos ayuntamientos que se vieron superados en parte por las leyes imprecisas
que condicionaban los proyectos. Esta situacin de falta de control se evidenci tambin en el
reglamento de construcciones vigente; ante esta situacin surgi la Comisin de Planificacin de
Mrida en 1936,48 la cual fue de corta duracin. Durante esta dcada, la Asociacin de Ingenieros Constructores propuso en 1944 la redaccin de un Cdigo de Construcciones para Mrida y
sus Colonias, que permitiera modernizar y sustituir las Ordenanzas Municipales de 1919, pero
las autoridades municipales no los tomaron en cuenta.49
Ante este desorden el 3 de octubre de 194550 fue decretada la Ley de Planificacin de la Ciudad de Mrida y sus Alrededores, por el Gobierno del Estado; dicha ley autoriz la creacin de
un Comit de Planeacin que se encargara de trabajar en el Plano Regulador de la Ciudad, en
el reglamento de construcciones, en la zonificacin de la ciudad, en expedir un reglamento de
fraccionamientos urbanos y suburbanos y dems temas del ramo; adems de adaptar los centros de poblacin a los requisitos que llenan las necesidades actuales y prevean las necesidades
futuras de comodidad, higiene, economa y esttica de la vida de los habitantes51
Sin embargo, por parte de las autoridades hubo una falta de inters en la aplicacin del citado
decreto y se reflej en el corto tiempo de trabajo del Comit; al respecto el arquitecto Leopoldo
Tommasi Lpez lo manifest en 1951 en su libro cuando abord el tema de la planificacin,
y coment:
La Comisin trabaj unos cuantos meses, como consta en las actas respectivas y qued, como hasta
hoy, postergada, olvidada, menospreciada. Nadie la recuerda ni la toma en cuenta en estos aos de
efervescencia constructiva. A pesar de la Ley, las autoridades municipales han vuelto a las andadas, sin
concepto alguno de la responsabilidad.52
48
Leopoldo Tommasi Lpez, Alineamientos, Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 25 de mayo de 1950, p. 5.
Leopoldo Tommasi Lpez, Reglamento, op. cit., 2 de marzo de 1950, p. 5.
50
Leopoldo Tommasi Lpez, Vigencia, op. cit., 16 de marzo de 1950.
51
Leopoldo Tommasi Lpez, La ciudad de, pp. 225, 226.
52
Leopoldo Tommasi Lpez, La ciudad de ayer, p. 229.
49
57
58
Al parecer el nico avance que se logr durante aquellos aos fue que el ayuntamiento acord
en 1948 contratar a la Compaa Mexicana Aerofoto S.A., para que realizara un levantamiento
fotogrfico areo de la ciudad, considerada entonces de aproximadamente 42 km; dicho trabajo
se consider importante ya que se tuvo un plano actualizado de la ciudad.53
Un anlisis de las nuevas colonias que se proyectaron y se comenzaron a construir en los aos
cuarenta, mostr cuales eran las condiciones que prevalecan en ese momento, en relacin con
la traza, el tamao de los lotes proporcionados y, sobre todo, en los aspectos de la dotacin de
equipamiento y servicios. A pesar de que en esta dcada se registr un gran nmero de colonias,
slo se observaron las ms importantes y aquellas con las que se cont con la informacin de
sus caractersticas.
Las colonias analizadas fueron: Bojrquez, Chuminpolis, Corts Sarmiento, Mxico, fraccionamiento Henequeneros, Crescencio Carrillo y Ancona, Miguel Alemn y Pensiones.
Las otras colonias que se identificaron fueron a partir de los planos de la ciudad de 1944 y 1949.
En el plano de 1944 se sealan como parte de la ciudad las colonias Yucatn, Reparto Tanlum,
Santa Rosa, la Nueva del Sur (en 1949 aparece como Reparto San Isidro). Y del plano de 1949
se registraron las colonias Roma, Buenavista, Felipe Carrillo Puerto, Industrial, Cuauhtmoc (ya
no existe), Chichn Itz, Azcorra, Mercedes Barrera, Reparto San Isidro, La Reja (no existe actualmente) y Aviacin (ya no existe).54 Otra rea que tambin se anex, segn el decreto de la
Legislatura del Estado con fecha de 8 de febrero de 1941, fue Itzimn.55 Ver plano 1
53
59
Durante la dcada de los aos cuarenta, el gobierno del estado tuvo participacin directa en el
crecimiento de la ciudad. En 1941, el Congreso del Estado aprob la reintegracin del pueblito
de Itzimn a Mrida, como el cuartel dcimo,56 posteriormente el mismo organismo aprob las
primeras concesiones que fomentaron el desarrollo de algunas colonias. Ya durante la dcada
de los veinte se haban otorgado concesiones para apoyar la construccin de casas en las actuales avenidas Itzaes, Coln y Cupules.57 Los legisladores aprobaron conceder primas libres de
impuestos municipales y estatales por determinados aos a los propietarios de los predios de las
nacientes colonias Mxico, Corts Sarmiento y Pensiones a partir de los aos 1945, 1946 y 1949,
respectivamente.58
Las tres colonias en donde el gobierno tuvo una participacin directa fueron la colonia Mxico,
Miguel Alemn y Pensiones, las tres promovidas con la finalidad de abatir el problema de falta
de vivienda. La colonia Mxico fue creada bajo los auspicios de la institucin de beneficencia
y utilidad pblica denominada Fomento de Yucatn, creada por el mismo gobierno (1942); y en
ella se consideraron espacios que no haban incluido otros asentamientos,59 sin embargo, slo se
concret el parque. En la colonia Miguel Alemn se manifest de una manera ms clara la intencin del gobierno de dotar a la ciudad de un modelo de desarrollo acorde con su poca, con un
trazo de 45 grados con respecto de la retcula tradicional por motivos climticos, y, sobre todo,
por la dotacin de servicios de equipamiento e infraestructura, as como en la colonia Pensiones,
que fue la primera que incluy su propio servicio de alumbrado y agua potable, lo que sin duda
reflej la tendencia modernizadora de dotar a las viviendas con servicios que garantizaban un
mayor bienestar social.60
56
60
La colonia que se consider con menos equipamiento fue Pensiones. El plano mostr slo un
pequeo parque triangular y en la promocin y publicidad de dicha colonia no se inform de
estos servicios.61
Es importante sealar que la conexin de estas colonias con la ciudad no fue planeada. En el
caso de la colonia Mxico, se consider en principio que se conectara con la colonia Itzimn
y luego con la prolongacin de Montejo (que se llam Paseo Nach Cocom). Para llegar a la
Pensiones haba que cruzar calles poco transitadas probablemente sin pavimentar de las
colonias Garca Giners o San Damin; la Corts Sarmiento se comunicaba con la angosta calle
65 poniente y, finalmente, la Miguel Alemn por una avenida de dos carriles angostos que comenzaba en el cruce de la calle 50 con la avenida Prez Ponce.
Colonia Mxico
La colonia Mxico fue uno de los proyectos que promovi Fomento de Yucatn; el primer plano
donde apareci la colonia fue en 1944.62 La Legislatura del Estado, en su decreto 223, de 28 de
julio de 1945, exent de contribuciones por 10 aos a los dueos de los predios que se establecieran en esa colonia para fomentar su poblamiento, ya que la colonia fue promovida para abatir
el problema de vivienda para las clases media y obrera.
Segn el plano del proyecto publicado en el ao de 1948, se plante con un trazo tradicional
ortogonal, con 72 manzanas en dimensiones de 80 x 80 metros y 5 secciones de otras manzanas
que colindaban con la colonia Itzimn, y se proyect con varios equipamientos, como biblioteca
pblica, escuela primaria, Escuela de Artes y Oficios con sus talleres, pequeas industrias, cineteatro, comercios, reloj pblico y casino obrero.63 En 1946 ya haba comenzado la construccin
61
61
de las primeras 17 casas, y varias calles estaban pavimentadas.64 Fomento de Yucatn y Distribuidora de Inmuebles anunciaron en 1948 que estaba completamente urbanizada la colonia. De los
servicios planteados slo se construyeron el parque y la Escuela de Artes y Oficios. Durante la
dcada de los aos cincuenta y sesenta adquiri ms importancia su ocupacin, sin embargo, la
finalidad inicial no se cumpli y fueron vendidos los lotes a personas con alto poder adquisitivo,
convirtindose en el lugar de emplazamiento preferido de la clase alta, y el lugar de construccin
de mltiples viviendas residenciales modernas.65
64
65
62
66
63
Colonia Pensiones
La colonia Pensiones surgi como una promesa de campaa del Lic. Miguel Alemn Valdez a los
trabajadores al servicio del estado, con la finalidad de contribuir a aliviar el problema de la habitacin. En 1950, cuando el presidente Miguel Alemn inaugur la colonia, sta tena ya concluidas 87 casas y de ella se destacaban, adems de las caractersticas de las viviendas, los servicios
con que contaba, como el agua potable,72 pavimento, embanquetado, camellones y alumbrado;
en el ramo de comunicaciones se informaba que ya exista servicio regular de autotransportes.
En contraste con estas ventajas, al parecer, la colonia se dise sin parque pblico. Las viviendas
realizadas tenan las siguientes caractersticas: a) de una recmara, 61 m de construccin, b) de
2 recmaras, 91 m, y c) 3 recmaras, 121 m; stas se construyeron en lotes de 450 m en promedio.73 Tambin se destacaba el sistema constructivo que consista en muros de mampostera
de 30 cm, techos de losa armada y pisos de mosaico. Fig. 6
Por su parte, la iniciativa privada inici una serie de inversiones en diversos sectores de la ciudad. En estas colonias o fraccionamientos, la dotacin de servicios no fue homognea, no todas
contaron con los espacios destinados a parque o escuelas, y en la mayora el atractivo era que
contaban con algunas calles petrolizadas y con lnea de camin urbano.
71
64
Fig. 6. Plano de la
colonia Pensiones.
Imagen tomada del Plano
de la Ciudad de Mrida
publicado en 1957 por el
Comit de Planificacin
del Estado de Yucatn.
Colonia Bojrquez
El promotor de esta extensa colonia al poniente de la ciudad fue el Sr. Ramiro Bojrquez; el
primer plano donde apareci fue en 1941, pero con el nombre de colonia Chunhus, y tres
aos despus apareci como Bojrquez. En 1946 su promotor inform que la colonia ya tena
eficiente servicio urbano de camiones sobre la carretera a Caucel74 y que la calle principal que
llegaba a su plaza central estaba petrolizada.
74
65
75
66
Colonia Chuminpolis
En el ao de 1944 se anunci la venta de aproximadamente 81 lotes en varias manzanas de esa
colonia, que fue fundada en el siglo XIX, al sur del templo de San Pedro.81 Las manzanas ya se
haban trazado desde mucho antes, por lo que este proyecto demuestra que an se encontraba
deshabitada parte de la colonia; la publicacin refiere los atractivos con que contaba el sector:
escuela, templo y transporte pblico, por la Calle Real de Chuminpolis.82 Fig. 9
81
82
67
Colonia Henequeneros
Con este nombre anunci durante 1945 y 1946 el Sr. lvaro Castillo un proyecto de fraccionamiento en el extremo sur de la ciudad, colindante con la colonia Delio Moreno Cantn. Como
ventajas ofreca agradables vistas al campo areo, amplio parque, lotes de 400 m2, servicios de
transporte y luz, y la comunicacin directa con el centro de la ciudad por medio de la calle 60.
Para 1949 ya se le conoca como colonia Castilla Cmara.83 Fig. 10
Un anlisis de lo anterior mostr cmo, a pesar de que el gobierno encabezado por el seor Ernesto Novelo Torres tuvo la intencin de modernizar la ciudad normando el crecimiento ordenado, el cual previera las necesidades de comodidad, higiene, economa y esttica de la vida de los
habitantes, va la emisin de la Ley de Planificacin de la Ciudad de Mrida y sus Alrededores,
esto no prosper. Aunado a esto, la obsolescencia de las ordenanzas municipales, pero sobre
83
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 22 de julio de 1945. El plano de 1949 ya le asigna ese nombre.
68
todo el poco control de las autoridades correspondientes y la falta de conciencia de los fraccionadores, hicieron que durante esa dcada la ciudad creciera sin considerar espacios generosos
para la dotacin de equipamientos para las nuevas reas habitacionales. Los fraccionamientos de
la iniciativa privada escasamente los promocionaban con los atractivos de la lnea de camiones y
calle petrolizada; fue notable la ausencia de espacios destinados a mercados, escuelas, templos,
incluso parques, entre otros, hecho que tambin fue reproducido por parte del gobierno en el
caso de la colonia Pensiones.
2.2.2 La infraestructura
Las vas de comunicacin
Las obras relevantes de infraestructura que se identificaron fueron dos: la construccin de la avenida Campo Deportivo (1940) y la prolongacin hacia el sur de la avenida Itzaes84 en 1945. Con
alcances diferentes, fueron proyectadas la primera para uso residencial, de longitud aproximada
de medio kilmetro y en trazo curvo que poda considerarse como una prolongacin del Paseo
de Montejo, pero slo para ser sede de amplias residencias, no se cree que se haya pensado
como va de salida hacia Progreso; y la segunda, hacia el sur, la cual tuvo un mayor impacto ya
que se convirti en la avenida de salida a Campeche, la que mucho antes, desde el siglo XIX, se
realizaba pasando por el Cementerio. Antes de finalizar la dcada ya se haba trazado un tramo
de aproximadamente dos kilmetros al sur hacia el aeropuerto, para lo cual fue necesario demoler varias casas.85 La ampliacin definitiva de la va, con su camelln, se concluy durante
la dcada de los aos sesenta. De igual forma se proyectaron algunas otras en el mismo sector,
pero no se construyeron.86
84
Informe del ciudadano Ernesto Novelo Torres, gobernador constitucional de Yucatn ante la XXXV Legislatura del
Estado, 1945, Mrida, Mxico, 1945, p.40.
85
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 20 de febrero de 1948.
86
Op. cit., 22 de agosto de 1947. Se aprob la construccin en 1947 de una avenida que comenzara a una cuadra del parque de Santiago, sobre la calle 59 A, comunicando con la avenida Itzaes, con dos amplias calles, aceras y
camelln, dicha obra no se realiz.
69
Agua potable
En cuanto a los servicios de agua potable, aproximadamente 10% de las casas contaba con l
y era proporcionado por la Compaa Refrigeradora;90 la mayora de los habitantes consuman
agua de lluvia de aljibes o de pozos, lo que produca elevados ndices de enfermedades y defunciones, principalmente de infantes. Ante esta situacin el gobernador Ernesto Novelo Torres
realiz entrevistas con funcionarios del Banco Nacional Hipotecario Urbano y de Obras Pblicas
y se acord realizar los estudios tcnicos. Se consider factible que se tuvieran los estudios y el
proyecto a fines de 1945, con el fin de empezar las obras de introduccin del agua potable y
drenaje de la ciudad.91 Sin embargo, esto slo se qued en la fase inicial.
Las nicas dos reas de la ciudad que se proyectaron en esta dcada con los servicios de
agua potable fueron las colonias Pensiones y Alemn,92 servicio con el que contaron en la
dcada siguiente.
En relacin con la dotacin de infraestructura, fue en las dos obras promovidas por iniciativas
del gobierno federal en las que se cumpli con una accin de modernizacin vital para los
87
70
habitantes, la introduccin del agua potable; este hecho se dio en las colonias Pensiones y
Miguel Alemn.
Informe de Gobierno del ciudadano Ernesto Novelo Torres, gobernador constitucional a la XXXV Legislatura del
Estado, 1942, Mrida, Mxico, 1942, pp. 135-136.
71
Plano 2. Equipamiento de
salud construido en la dcada de los aos cuarenta,
acciones que se sumaron a
la consolidacin de esa va
y zona de la ciudad.
72
En el equipamiento educativo, se emprendieron acciones para dar cumplimiento a los programas nacionales, adems de construir numerosas escuelas primarias en los barrios y colonias.
En donde el Comit Pro-mejoramiento de Mrida tuvo una labor fundamental, sin duda alguna
94
Informe de Gobierno, del gobernador constitucional de Yucatn, Jos Gonzlez Beytia, ledo ante la XXXVII Legislatura de Yucatn, comprendido del 1 de febrero al 31 de diciembre de 1946, Mrida, Mxico, 1947, p. 89.
95
Informe de Gobierno del ciudadano Ernesto Novelo Torres, Gobernador Constitucional a la XXXV Legislatura del
Estado, 1942, Mrida, Mxico, 1942, pp. 100-101.
96
Vid. infra, cap. 4, subcap. 4.1
73
la obra ms importante, fue el Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto97 (1945) diseado por
los arquitectos Max y Manuel Ambilis; ubicado en la zona que ocup la ex Ciudadela de San
Benito, constituy una accin significativa por la amplitud en su programa, instalaciones e inversin; const de espacios para jardn de nios, primaria, secundaria y la Escuela Normal Rodolfo
Menndez de la Pea; as como con una sala de conciertos denominada Jos Jacinto Cuevas.
Constituy una obra en donde la expresin formal era el resultado de la funcin (Fig. 11). Fue
objeto de mltiples crticas por el hecho que se construy en una zona tan cntrica, colindante
con el Mercado Grande, con tantos problemas de insalubridad.98
En el rubro de abasto, se concretaron dos proyectos: el rastro y el mercado municipal Lucas de
Glvez; para la construccin, el Congreso del Estado autoriz al ayuntamiento de Mrida contraer un prstamo;99 el proyecto fue presentado en 1947, ao en el cual se iniciaron los trabajos,
se concluy en 1949 y fue ocupado, aunque su inauguracin fue al ao siguiente. Su ubicacin
colindante al Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto fue muy polmica. El proyecto sin duda
fue innovador, en l se hicieron planteamientos funcionalistas, utilizando los recursos que el
concreto armado proporcionaba al lograr espacios libres para disponer los puestos en los interiores; un portal en el acceso norte posibilitaba el libre acceso de peatones hacia la zona de comercios y la entrada por ese lado. La expresividad del mismo correspondi al tratamiento de los
elementos estructurales; en el lado poniente, donde se ubic la pescadera, se resolvi el espacio
a doble altura; el tratamiento que se le otorg al gran volumen indudablemente intent acusar
la horizontalidad del mismo a base de franjas que se logr mediante la secuencia de trabes en
forma de grapas que dan paso a las cartelas para lo proteccin de la insolacin del poniente,
las que rematan en una gran banda horizontal. El hecho de construir el mercado en dos niveles
result innovador, pero provoc que la parte alta no se ocupara como se haba proyectado, lo
que ocasion que numerosos vendedores salieran a las calles a vender. Fig. 12
97
74
Por su parte, la iniciativa privada inici otras acciones tambin de importancia que comenzaron
a transformar la fisonoma del centro y los barrios fundamentalmente en dos sentidos; por un
lado, se continuaron con las formas del nacionalismo, en menor grado neocoloniales, y por otro,
con una mayor incidencia, con las formas de la modernidad del dco, todas ellas con una marcada verticalidad y quiebres geomtricos como remate; entre stas estuvieron el Banco Familiar
de Ahorros (1945) (Fig. 13), el cine Rex (1949) (Fig 14) y el teatro Mrida (1949) (Fig. 15).
75
100
76
Otro edificio que se construy en el centro, en la calle 61x 56, fue el destinado a la Compaa
General de Seguros La Peninsular, Fig. 19 (1948), proyectado por el arquitecto Leopoldo Tommasi Lpez y obra del arquitecto Miguel ngel Cervera Mangas; no fue un edificio notable, pero
s uno de tantos que se insertaron en las numerosas esquinas del centro de la ciudad, con un
lenguaje montono y desprovisto de alguna riqueza formal o espacial.
Otra intervencin que modific la traza fue la llamada calle nueva 63-A, la cual consisti en
dividir una calle y sacar otra en medio; sta con fines exclusivamente comerciales, en ella se alojaron, a decir de la nota periodstica, treinta y ocho comercios modernos,101 Fig. 20. La fisonoma
que stos presentaban consista en una volumetra predominantemente horizontal, acentuada
por la presencia de una marquesina y en planta baja un predominio del vano sobre el macizo,
contrario a las caractersticas histricas.
101
77
Fig. 18 Edificio de
La Latinoamericana,
Compaa de Seguros.
Imagen tomada del Diario
de Yucatn, 12 de febrero
de 1947.
Fig. 19 Compaa General
de Seguros La Peninsular.
Imagen tomada del
Diario de Yucatn,
2 de octubre 1948.
Proyecto: Arq. Leopoldo
Tommasi Lpez. Construccin: Arq. Miguel ngel
Cervera Mangas.
78
Plano 3. Equipamiento
industrial construido
en la dcada de los
aos cuarenta.
79
80
81
Plano 4. Equipamiento
urbano construido en la dcada de los aos cuarenta,
en la ciudad
de Mrida.
82
Se consider para el estudio dividir la ciudad en sectores norte y sur; o en cuadrantes. Se omiten las colonias
que no existen o no se mencionan actualmente (Cuauhtmoc, San Isidro, La Reja, Aviacin), caso contrario se anexa
una que no incluye los planos pero que la prensa registra: el reparto Crescencio Carrillo y Ancona.
83
El acelerado proceso de crecimiento de la ciudad de Mxico que se experiment durante la segunda y tercera dcadas del siglo pasado, coincidi con la poca en que se realizaron trabajos
de planificacin, tanto en Europa como en los Estados Unidos. Fue en este ltimo pas, en la
Universidad de Columbia, Nueva York, donde curs sus estudios profesionales el arquitecto Carlos Contreras (1892-1970), gradundose en 1925 y donde tuvo oportunidad de participar en importantes ejercicios de planificacin.105 De regreso a Mxico, ante un panorama desordenado de
las ciudades del pas,106 realiz una campaa para concientizar a la poblacin especialmente
a las autoridades y al gremio de arquitectos sobre la importancia de planificar el desarrollo del
pas. Para este gran proyecto consideraba necesario traer arquitectos planificadores, como tcnicos consultores para encargarse de los trabajos de planeacin del pas y preparar a profesionistas
nacionales en esas lneas; recomendaba la realizacin del Plano Regional del Distrito Federal;
establecer una escuela de pilotos areos fotgrafos, para trabajos de fotografa area; realizar publicaciones; difundir en las escuelas la importancia de la planificacin y buscar financiamiento
para estos trabajos.107
El arquitecto Contreras fund y dirigi la revista Planificacin de 1927 a 1929, importante foro
en el que autores nacionales y extranjeros difundieron trabajos que abordaban la problemtica
de organizar y reorganizar el desarrollo de las ciudades, carreteras y dems; tambin cre, con
los arquitectos Federico Mariscal, Ignacio Marquina y Manuel Ambilis, la seccin de Planificacin en el Departamento de Arquitectura del Ayuntamiento de la Ciudad de Mxico en 1925,
y un ao despus impuls la formacin de la Asociacin Nacional para la Planificacin de la
105
Gerardo G. Snchez Ruiz, El contexto que rode a las propuestas de planificacin del arquitecto Carlos Contreras, en Gerardo G. Snchez Ruiz, (coord.), Planificacin y urbanismos de Carlos Contreras, escritos de 1925 a 1938,
Universidad Autnoma de Mxico, Universidad Metropolitana-Azcapotzalco, Universidad Autnoma de San Luis Potos, Documentos para la historia de la arquitectura mexicana, races 2, Ciudad de Mxico, 2003, pp. 14,15.
106
El incontrolable crecimiento de las ciudades, en parte por las corrientes migratorias, propiciaba marginacin,
largos recorridos de los habitantes, contaminacin, falta de escala humana y demandas de empleo, servicios de infraestructura y equipamiento, as como complejos problemas de organizacin de las actividades comercial, industrial y
de trnsito. El ejemplo ms ilustrativo de este fenmeno es el rea metropolitana de la ciudad de Mxico, que aument su poblacin de la siguiente manera: de 720,753 en 1910, pas a 1757,530 en 1940, y a 8541,070 habitantes
en 1970, en Jorge E. Hardoy, Las reas metropolitanas en Amrica Latina en su arquitectura, Siglo XXI, Ciudad de
Mxico, 1983, p. 83.
107
Gerardo G. Snchez Ruiz, El contexto que rode, p. 15.
84
108
Gerardo G. Snchez, coord., Planificacin y urbanismo visionario, pp. 18, 29-30. Estaba constituida por el
presidente, secretario, tesorero, y vocales, as como consejeros, arquitectos, consultores y miembros honorarios; sus
integrantes eran personalidades internacionales y nacionales de la planeacin y el urbanismo, o representantes de
organismos pblicos y privados.
109
Rafael Lpez Rangel, Carlos Contreras en la historia de la planificacin urbana, en Gerardo G. Snchez Ruiz,
(coord.), Planificacin y urbanismos, p. 31.
110
Gerardo G. Snchez Ruiz, (coord.), Planificacin y urbanismos, pp. 79-84.
111
Gerardo G. Snchez, coord., Planificacin y urbanismo visionario, p.147; Jess Aguirre Crdenas, La docencia
universitaria en el campo de lo urbano, aspectos interdisciplinarios en Primer encuentro sobre la docencia, la investigacin y la prctica profesional en el campo de lo urbano en Mxico. UNAM, Mxico, 1982, trabajo indito p. 10.
112
Gerardo G. Snchez, coord., Planificacin y urbanismo visionario, p. 91.
85
86
dicho Plan inclua informacin sobre el crecimiento histrico, poblacional, fsica, econmica y
poltica-administrativa del puerto; entre otras propuestas consideraba la creacin de paseos de
circunvalacin al norte y sur de la poblacin, construccin de canales, reubicar la estacin del
ferrocarril, abrir una calle para la va frrea, ganar terrenos tanto al mar como a la cinega, e
inclua zonificaciones escolares, residenciales, tursticas, agrcolas, industriales y la construccin
de un aeropuerto.119 La propuesta de ganar terrenos al mar, para destino turstico, era similar a
la que se realiz en la ciudad de Campeche en los aos cincuenta. Un segundo plano regulador
de Progreso elaborado en la Ciudad de Mxico fue dado a conocer en 1961; del primero se dijo
que estaba extraviado.120
Por su parte, el despacho del arquitecto Mario Pani (1911-1993) realiz proyectos de urbanizacin y planificacin en el pas. En 1950 fue nombrado Primer Director Tcnico de la Comisin
de Planificacin Regional de Acapulco, cuyo crecimiento como ciudad, destino turstico y puerto era complejo;121 en 1952 l mismo conform un equipo de trabajo para la realizacin de los
Estudios de Planificacin sobre Yucatn, entre los que estuvo el arquitecto Jos Luis Cuevas, con
larga trayectoria en trabajos urbansticos en el pas.122 Otros trabajos de urbanismo que realiz
el arquitecto Pani fueron el de Ciudad Satlite en la capital del pas en 1957, los planos reguladores de Culiacn, Mazatln, de Guaymas, Sonora y un proyecto para las ciudades fronterizas
del norte del pas.
Entre los numerosos discpulos del arquitecto Jos Luis Cuevas destacaron Domingo Garca Ramos, Homero Martnez de Hoyos y Pedro Ramrez Vzquez.123
119
87
88
Posteriormente se fundaron la Sociedad Mexicana de Urbanismo y la Sociedad Mexicana de Planificacin en 1958 y 1962; y en 1968 se fund la Divisin de Estudios Superiores de Arquitectura
de la UNAM que otorgaba el grado de Urbanismo y Planificacin y que tambin se instituy en
el IPN y ms tarde en algunas universidades del interior del pas.130
A pesar de la importancia econmica de Yucatn en el contexto nacional, las grandes inversiones de la poca del Porfiriato y posteriormente de los gobiernos posrevolucionarios y la iniciativa privada, la esperada modernizacin de la ciudad de mediados del siglo XX normada y
controlada a travs de instrumentos de planificacin no haba llegado. Otras ciudades del pas
ya haban comenzado sus procesos de modernizacin. Y fue por parte de algunos agentes modernizadores en la figura de los arquitectos y del Estado que se empez a plantear la urgencia
de planificar la ciudad.
Durante los aos cincuenta el crecimiento de la ciudad, producto de la anexin de nuevas colonias, no fue significativo; en este aspecto las numerosas colonias proyectadas en la dcada
anterior continuaron su desarrollo y poblamiento. En la prensa slo se anunciaban algunas de las
colonias iniciadas en los aos cuarenta, principalmente la Mxico y la Miguel Alemn. Sobre el
desarrollo de la ciudad, se trat en varias ocasiones la conveniencia de actualizar el reglamento
de construcciones, se efectuaron algunas reuniones de un Comit131 creado para tal fin, pero no
se concret, y los criterios para las nuevas obras y expansin de la ciudad fueron consideradas sin
lineamientos definidos. Varios aspectos relacionados con el desarrollo urbano fueron tratados en
breves artculos que incluan antecedentes histricos, sealando su importancia sin muchos resultados. En 1953 se cre la Junta de Mejoramiento Moral, Cvico y Material de Mrida, que denunci y recomend atender varias deficiencias del desarrollo de la ciudad, como control del ruido,
falta de parques, prostitucin, loncheras, necesidad de contar con agua potable y otras ms.132
El tema de la planificacin fue el predilecto; diversos sectores le prestaron atencin durante toda
la dcada de los cincuenta, aunque con pocos resultados. Ante el trabajo efmero de la Comisin
130
89
133
Leopoldo Tommasi Lpez, Urbansticas Alineamientos, Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 25 de mayo de
1950, p. 4.
134
Ibid., Vigencia, 16 de marzo de1950, p. 5.
135
Ibid., Propsito, Diario de Yucatn, 16 de febrero de 1950, p. 4.
136
Vid, infra, cap. 3, subcap. 3.3.2.
90
Iniciando el ao de 1952, el arquitecto Leopoldo Tommasi fue designado Jefe del Departamento
de Obras Pblicas Municipales. Aquello seguramente represent para l la oportunidad de poner
en prctica varias de las propuestas que haba tratado en su libro. Al mes siguiente,137 convoc a
personas relacionadas con la construccin y expuso sus proyectos para modernizar la ciudad
urbansticamente.138 Entre los temas que someti para su discusin estuvieron: los alineamientos de los predios y la construccin de banquetas, la necesidad de hacerlo por calles siguiendo
un solo trazo; el requerimiento de presentar cuatro juegos de planos con especificaciones de
las obras importantes; abrir una oficina para apoyar a los maestros contratistas con los trmites;
el requisito de tener a la mano en la obra los planos y el permiso correspondiente; la revisin
de las tarifas por los permisos de construccin; y como urgente, la necesidad de nombrar una
comisin para que estudiara y redactara el nuevo reglamento de construcciones. Por su parte,
uno de los asistentes, el Ingeniero Humberto Arjona Rejn, dio lectura a diversas propuestas,
entre las que estuvo la relativa a la elaboracin del Plano Catastral de la Ciudad de Mrida, del
cual dijo lo siguiente:
Se considera que es preciso proceder a la inmediata elaboracin del Plano Regulador de la ciudad, con
el objeto de controlar su creciente desarrolloSu realizacin responde a muchas demandas a saber:
ms firme apoyo a las obras de ingeniera sanitaria; mejor urbanizacin de las zonas aledaas de la
poblacin, ms justicia en la aplicacin del impuesto predial urbano; mejor planeacin de los servicios
pblicos, y, en resumen: mejor perspectiva de la ciudad.139
91
alcantarillado a la ciudad. El arquitecto Pani declar que vino porque se le solicit su consejo
de tipo general140 sobre planificacin de la ciudad y por su experiencia en proyectos similares
como el que haba elaborado en Acapulco, as como los proyectos de planificacin en varias
ciudades del pas y en el Puerto de Progreso en 1950, anteriormente mencionados.
En 1952 el gobernador Toms Marentes le encarg al arquitecto Mario Pani la elaboracin del
Plano Regulador,141 quien trabaj con los arquitectos Enrique Manero Pen, Domingo Garca Ramos y Jos Luis Cuevas y el ingeniero Vctor Vela en dos estudios de planificacin para Yucatn:
sobre la zona henequenera y sobre el plano regulador, documento que se public en la Revista
Arquitectura Mxico, en 1953.142
Del Plano Regulador de la ciudad de Mrida se presentaron los estudios y las propuestas de las
cuales se dijo que el anteproyecto se presenta en forma de recomendaciones para ser discutidas con sano juicio, libre de intereses mezquinos;143 sin embargo, no pareci interesarle mucho
a las autoridades municipales, ya que en la prensa no se registr ninguna discusin o anlisis
de la propuesta; al poco tiempo se volvi a mencionar sobre la urgencia de elaborar un plano
regulador para la ciudad.
El estudio elaborado por el arquitecto Pani y sus colaboradores contena aspectos relativos al
crecimiento histrico de la ciudad fundacional hasta 1906; antecedentes histricos y naturales;
datos de poblacin, actividades productivas, densidad de construccin, tipos de construccin,
densidad de poblacin, uso del suelo y vehculos en circulacin, entre otros datos. Plantearon
nueve propuestas que contemplaban soluciones a la continua expansin territorial de la ciudad
que representaba un oneroso costo al Municipio y al Estado, y recomendaban fomentar el crecimiento vertical para reducir los costos.
140
92
Para el problema del centro, su congestionamiento por la invasin y desbordamiento de la actividad comercial por el exceso de todo tipo: fbricas, cines, hoteles, edificios educativos, religiosos,
terminales de autobuses, etc., recomendaban: a) destinar la zona central exclusiva para equipamiento educativo superior, de gobierno, comercial fijo y salas de espectculos, b) limitar la zona
en que estaban las industrias y reubicarlas hacia una zona exclusiva para ese uso hasta que fuera
posible su traslado, c) reubicar bodegas y almacenes y descongestionar el mercado, d) eliminar
las terminales de autobuses, d) reglamentar y proteger las zonas habitacionales.
Recomendaban acciones para regular el sistema vial, evitando la centralizacin de las rutas de
transporte de pasajeros. El planteamiento de la creacin de anillos de circunvalacin, uno perifrico y otro en el centro de la ciudad, para descongestionar el trnsito en el centro; y regular el crecimiento de Mrida mediante la adquisicin por parte de las autoridades de un cinturn en torno
del actual lmite de la ciudad, que slo el gobierno podra ampliar cuando fuera necesario.144
Sin embargo, a pesar de que en el documento se incluyeron lineamientos para controlar el crecimiento de la urbe y regular los servicios, al parecer el trabajo no cubri las expectativas o el inters porque despus de la publicacin se sigui insistiendo en la necesidad de contar con dicho
plano. As lo demuestran los siguientes hechos: en mayo de 1956 se le solicit al presidente de
Mxico su apoyo para la realizacin del Plano Regulador de la Ciudad,145 y en agosto siguiente
se inform de la estancia en la ciudad de un representante de la Secretara de Bienes Nacionales
que recavaba informacin para aquel trabajo.146
En el informe del alcalde municipal realizado en mayo de 1956, declar sobre las gestiones
que realiz con el presidente de la Repblica para hacer el Plano Regulador y argument que
era con la intencin de acabar con la anarqua reinante, sobre todo por lo que se refiere a
144
Estudios de planificacin sobre Yucatn, sobretiro del nmero 41, de la Revista Arquitectura Mxico; adems
de este estudio se plante otro para Yucatn denominado Anteproyecto de Planificacin de la Regin Henequenera,
con el propsito de dinamizar la industria de la fibra y promover asentamientos humanos contiguos a los ncleos
productivos. Para ampliar el tema, ver: Marco Tulio Peraza Guzmn, El camino incierto en La memoria inmediata,
patrimonio siglo XX, Ediciones de la Universidad Autnoma de Yucatn, Mrida, Mxico, 2007, pp.18-31.
145
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 12 de mayo de 1956.
146
Op. cit., 1 de junio de 1956.
93
la fabricacin al vapor de colonias sin calles ni luz, para luego, construidas ya algunas casas,
exigirle al Ayuntamiento todos los servicios correspondientes.147 Tambin coment que esta
situacin era principalmente en colonias suburbanas y no urbanas, aspectos que aclarara el
Plano Regulador, instrumento que no lleg en esa dcada.
Uno de los resultados que se obtuvieron fue la edicin de un plano de la ciudad en 1957,148 con
crditos del trabajo al gobernador Vctor Mena Palomo, como presidente del Comit de Planificacin del Estado de Yucatn; como vicepresidente al seor Benjamin Gngora Triay, alcalde de
Mrida; como coordinador al seor Abel Paredes y como secretario: jefe de la oficina de dicho
Comit al arquitecto Leopoldo Tommasi Lpez. Ese plano fue muy probablemente al que se refiri el arquitecto Tommasi que se estaba elaborando desde 1951; varias de las colonias que aparecieron en la dcada de los cuarenta no se indicaron en l, probablemente porque se consideraron como suburbanas o quizs estaban en proceso de regularizacin por parte del Municipio. Al
respecto, la prensa se refiri al mismo como el plano ms completo del que se poda disponer a
la fecha, y se le atribuy el trabajo al arquitecto Leopoldo Tommasi Lpez.149 Fig. 21
En esta dcada el crecimiento de la ciudad no fue notorio; ms all de la falta de instrumentos
para regular ste, el factor determinante fue la situacin econmica que prevaleci, motivada por
la suspensin de la venta de la fibra de henequn en el mercado estadounidense, como consecuencia del fin de la segunda guerra mundial.
147
Op. cit., 12 de mayo de 1956, Informe del alcalde Dr. Benjamn Gngora Triay.
El plano se public en el Diario de Yucatn el 8 de septiembre de 1957.
149
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 7 de septiembre de 1957.
148
94
95
2.3.2 La infraestructura
Las vas de comunicacin
En esta dcada la autoridad municipal realiz inversiones importantes en el Paseo de Montejo.
La prensa le dedic varias publicaciones con reseas histricas de su construccin, inclusive
las prolongaciones que se efectuaron. A fines de 1959 se inauguraron importantes mejoras que
consistieron en un nuevo pavimento, la construccin de un camelln central de 1.60 metros,
del que careca desde su construccin, y la reconstruccin de aceras.150 En otras notas previas
se sealaban el cuidado y sembrado de algunos rboles, de iluminacin especial a la avenida,
incluyendo la instalacin de nuevos postes y lmparas de importacin; y la devolucin oficial de
su nombre, ya que en un tiempo se le cambi por el de Paseo Nachi Cocom. Este ltimo nombre
se le asign en 1953 a la actual prolongacin al norte, que llegaba hasta la fuente.151
As mismo, se construyeron y consolidaron varias avenidas en el norte, noreste y noroeste de la
ciudad; stas fueron: las de la colonia Pensiones, Roma, Buenavista, la que conduce a la colonia
Miguel Alemn y la avenida de la colonia Mxico Oriente.152 Ver plano 5
Otra obra importante que se inaugur durante esa dcada fue la del Monumento a la Patria, obra
del arquitecto Manuel Ambilis153 que despus de once aos de trabajos concluy el escultor
Rmulo Rozo.154
150
96
97
Alumbrado pblico
El servicio de alumbrado pblico fue extendindose ahora a ms avenidas; las pruebas de nuevos equipos de iluminacin postes, lmparas y equipos se realizaban no slo en la plaza
principal sino en las avenidas Paseo de Montejo,155 Paseo Nach Cocom156 y en el parque de las
Amricas.157 Varios monumentos de la ciudad fueron iluminados, en la mayora de los casos
los equipos fueron de importacin. En este rubro se hicieron importantes inversiones tanto para
el beneficio del estado como de la ciudad. En 1954 se concluy la Planta Termoelctrica de
Mrida,158 destinada a electrificar una parte del permetro costero y a enriquecer el servicio de la
ciudad. Dos aos ms tarde se inaugur la Planta Termoelctrica Federal Nach Cocom (1956)159
en las afueras de la ciudad.160 Fig. 22
155
98
99
As la dcada haba transcurrido y no se haba podido concretar uno de los proyectos fundamentales para la modernizacin de la ciudad, el agua potable.
En la colonia Miguel Alemn se realizaron las primeras obras de introduccin del servicio de
drenaje colectivo; ste present serias deficiencias que se reportaron en 1956, ya que se haban
instalado ductos con dimetros menores de los que se requeran y desembocaban al aire libre
cerca de las instalaciones de la Secretara de Agricultura y Ganadera, a un costado de la colonia Mxico y la carretera de salida a Motul; las gestiones para rectificar tal estado fueron muy
tardadas, se recomend al Banco Nacional Hipotecario Urbano y de Obras Pblicas construir
10 fosas spticas,168 pero todava en mayo de 1958 no se haba solucionado el problema.169
En consecuencia tanto las obras de introduccin de agua potable como del drenaje, a pesar de
tantas gestiones an en la colonia Miguel Alemn no lograron materializarse para la modernizacin de la ciudad.
168
100
101
construy uno nuevo que se inaugur en 1959;176 sobre esta importante obra (Fig. 24), la Secretara Municipal proporcion la siguiente informacin:
El discurso en torno de la modernidad de la obra fue por los servicios que proporcionaba en relacin con la higiene y confort para sus ocupantes, as como las innovaciones tecnolgicas178 que
el constructor utiliz. Estos inmuebles fueron fundamentales en la modernizacin de esas reas
y representaron un desahogo para la concentracin de este servicio en el centro.
En esta dcada las acciones ms significativas se realizaron en el rubro de salud, si bien el Estado tuvo
participacin en la promocin de este rubro, fue principalmente la iniciativa privada la que construy
un gran nmero de acciones teniendo como lugar de emplazamiento el centro y los barrios.179
176
102
En las clnicas y consultorios mdicos que construy la iniciativa privada se atendan especialidades como maternidad, cardiologa psiquiatra, estomatologa, entre otras; stas fueron: la
Clnica Pasteur (1950); Clnica Dental (1952); Maternidad Santa Mara (1950); Maternidad 10
de Mayo (1954); Clnica de Maternidad y Ginecologa (1952); Centro Mdico de Sureste (1956);
Clnica de los Doctores Medina Salazar (1957); Consultorio del Doctor Fernando Torre Gamboa
(1958); la Clnica Mercedes (1958) y el Instituto Neuropsiquitrico en la avenida Itzaes frente al
parque de la Paz, lugar de emplazamiento de varios hospitales. Ver plano 6.
En varios casos fueron casonas del centro adecuadas las que sirvieron para el nuevo uso, y en
otros se construyeron ex profeso, entre ellas estuvieron: el Neuropsiquitrico (1954), ubicado en
la avenida Itzaes, del ingeniero Mario Duarte Carrillo, quien emple el art dco en el exterior y
en planta el esquema de patio interior; Fig. 25, en el Centro Mdico del Sureste del arquitecto
Ambilis, la solucin formal consisti en un tratamiento protorracionalista, ste ltimo ubicado
en la zona central colindando con el barrio de Santiago, el arquitecto rompi con el alineamiento en fachada, abri una calle para el ingreso de los autos a la parte posterior, utiliz un portal
con columnas en fachada, todos ellos elementos que rompan con la fisonoma de los predios
de la zona.
103
Plano 6. Equipamiento de
salud en la dcada de los
aos cincuenta.
104
Otro inmueble que se inici a finales de los aos cuarenta y se concluy en 1952 fue la Facultad
de Medicina de la Universidad de Yucatn; se ubic en la avenida Itzaes, enfrente del antiguo
Hospital OHorn de principios del siglo y de otros equipamientos de salud, esa fue otra accin
ms que se sum a la consolidacin de ese sector para los servicios mdicos; el tratamiento formal empleado fue el art dco; ste fue del gusto de mucha gente por lo que su permanencia en
Yucatn se alarg hasta esta dcada, como lo confirman la Facultad de Medicina y el Neuropsiquitrico. Fig. 26
Por su parte, el Estado construy en 1958 el Centro de Salud, con recursos de la Lotera Nacional para la Beneficencia Pblica, ubicado en el barrio de San Cristbal. Con el Centro de Salud,
perteneciente a la Secretara de Salubridad y Asistencia, se introdujo el sistema mdico federal al
Estado; en esta obra se utiliz un lenguaje nuevo, propio de los cdigos de la arquitectura moderna, en donde prevaleci el valor del volumen, la gran caja volada, el cuerpo limpio, asentado en
otro de acentuada horizontalidad; en el interior se utiliz un esquema lineal para la disposicin
del rea de consulta externa. Fig. 27
105
En relacin con el equipamiento educativo,180 entre los ms importantes que construy el Estado
estuvieron: la Facultad de Medicina ya mencionada, la Escuela Santiago Meneses, Fig. 28, en la
calle 52 x 73 centro; la Juan Crisstomo Cano y Cano, en la colonia Alemn, ambas obras de
1957 y del ingeniero Ramn Lpez Peraza. En las dos escuelas el ingeniero utiliz un esquema
que evocaba al empleado en las escuelas socialistas de 1932 de Juan O Gorman, dispuso el
acceso achaflanando la esquina y desarroll el edificio a lo largo de los brazos que partan de
su centro. El Estado continu con la construccin de edificios escolares para las colonias de los
barrios y colonias cercanas al centro; stas fueron seis; las que difieren de las anteriormente mencionadas por su tamao y capacidad.
180
106
Plano 7. Equipamiento de
educacin en la dcada de
los aos cincuenta.
107
Otros usos que propiciaron cambios en la fisonoma del centro fueron los bancarios; de este
gnero se construyeron el Banco de Campeche, Sucursal Mrida (1956) (Fig. 29) y el Banco de
Comercio de Yucatn (1958) (Fig. 30), ambos del arquitecto Flix Mier y Tern Lejeune y obra
de Franz Fortuny; en ambos se desalinea del paramento, prevalece el vano sobre el macizo e
introduce transparencias; en el primero se adelant hacia el frente la caja volada destacando su
permetro e invadiendo el espacio pblico.
181
II Informe de Gobierno del ciudadano Agustn Franco Aguilar, presentado ante la XLI Legislatura del Estado,
comprendido del 1 de febrero de 1959 al 31 de enero de 1960, Mrida, Yucatn, Mxico, 1960, p. 38. Diario de
Yucatn, Mrida, Mxico, 1 de mayo de 1959.
108
La cultura tambin produjo una arquitectura nueva, la antigua ferretera El Candado (1903) fue
modificada en 1957 para dar paso al edificio llamado El Aladino por ser el nombre del cine que
all se alberg; el arquitecto Flix Mier y Tern aprovech la versatilidad de la planta libre que
tena el edificio para el espacio de la sala, utiliz los portales de acceso planteando un lenguaje nuevo, respondiendo a la arquitectura moderna y a los factores climticos; en las fachadas
poniente y sur, orientaciones de alta incidencia solar, emple parasoles o cartelas, as como
ventanas horizontales protegidas por volados que acentuaban la horizontal de las mismas; en su
forma, suaviz la dureza del volumen preexistente y desapareci el chafln suavizando la esquina con una curva que le dio continuidad a las fachadas, la composicin evidencia el manejo de
los principios clsicos: un basamento, un cuerpo y un remate, el basamento remetido constituido por el portal y una franja integradora de los elementos verticales, el cuerpo lo constituy el
volumen horizontal conformado por la sucesin de franjas verticales, resultado del empleo de
parasoles y el remate compuesto por un vano corrido horizontal que enmarca la reminiscencia
del pasado en su primera epidermis, por lo que el empleo de formas nuevas no implic el desconocimiento de los principios ordenadores de la estructura clsica. Fig. 31
109
182
110
II Informe de Gobierno del ciudadano Agustn Franco Aguilar, presentado ante la XLI Legislatura del Estado,
comprendido del 1 de febrero de 1959 al 31 de enero de 1960, Mrida, Yucatn, Mxico, 1960, pp. 59, 60.
184
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 30 de enero de 1952. Para ampliar el tema, consultar: Ileana Gngora
Hernndez, El Hospital del Nio Lisiado Beatriz Velasco de Alemn, en Al Pie de la Letra, Nm. 9, Universidad
Modelo, Mrida, Mxico, pp. 6-10.
185
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 17 de abril de 1950.
111
Por parte de la iniciativa privada se emprendieron obras de inmuebles educativos para importantes rdenes religiosas: el Colegio Montejo, de los hermanos maristas (1953), en Itzimn, y el
Colegio Amrica (1954), de las monjas teresianas, enfrente al Monumento a la Patria, en Paseo de
Montejo, as como la Escuela Miguel Alemn, en la colonia del mismo nombre.
Una lectura del plano del equipamiento educativo muestra cmo las principales acciones por
parte de la iniciativa privada se ubicaron en la zona norte de la ciudad y si bien es cierto que
el Estado construy seis edificios escolares (Fig. 35) en diferentes colonias cercanas al centro,
no fueron comparables con el tamao de las construidas en el norte, otro gnero que reforz la
tendencia de crecimiento hacia esa rea de la ciudad.
Fue en el rubro de la industria privada donde se observ un impulso importante; se construyeron
grandes plantas que representaron un desarrollo econmico relevante para el estado; el lugar de
emplazamiento fue en diferentes zonas de la ciudad, entre ellas estuvieron: la Fbrica de Galletas
Dond (1950) del Ing. Mario Cmara Rosas, ubicada en San Cosme, en el cruce de las avenidas
Coln e Itzaes (Fig. 36); la Planta de la Cervecera Yucateca (1951), en El Fnix, de los ingenieros
Francisco Rubio Ibarra y Ramiro Bojrquez Molina (Fig. 37); la Planta Purificadora de Miel y Cera
(1955), en la calle 46 al sur, del centro; la Planta Embotelladora Coca Cola, en la avenida Aviacin (Fig. 38); la Panificadora Montejo, en la prolongacin de Montejo, y la Planta de Cementos
Maya, S.A. (1958) (Fig. 39). La importancia de estas obras sin duda alguna fue de ndole econmica para el estado, y los constructores fueron ingenieros civiles, en donde los aspectos de tipo
funcional fueron fundamentalmente los que prevalecieron en ellas; fue en la dcada siguiente
cuando estas condiciones cambiaron.
Una revisin al plano 8 muestra la distribucin de las industrias en la zona norte, con toda seguridad, a falta de un instrumento que normara su ubicacin alejada de zonas habitacionales;
esto tambin se puede leer como un hecho ms de la tendencia de desarrollo hacia esa rea de
la ciudad.
112
113
Plano 8. Equipamiento
industrial en la dcada de
los aos cincuenta.
114
Por lo anterior, se puede concluir que en la dcada de los aos cincuenta, el tema de la planificacin
y su concrecin en instrumentos de planificacin como recursos para la modernizacin de la ciudad, tampoco se logr. Resultaron en vano las gestiones emprendidas por parte del Estado, a travs
de la Junta de Mejoramiento, Cvico y Material para la ciudad Mrida, creada en 1953; el Departamento de Obras Pblicas Municipales encabezado en 1952 por el arquitecto Tommasi Lpez; el
Plan Regulador para la Ciudad de Mrida presentado en 1953 y encargado a especialistas de la ciudad de Mxico; y diversos profesionistas ya fuera a ttulo personal el caso del arquitecto Tommasi
a travs de su columna periodstica o a travs de las asociaciones gremiales; quienes denunciaron
y demandaron acabar con las deficiencias en la ciudad y la solucin ordenada al crecimiento, la
dotacin de servicios de infraestructura, ingeniera sanitaria, urbanizaciones en las colonias, planeacin y dotacin de servicios pblicos, trasporte y equipamientos equilibrados, entre otros.
Los aspectos relativos a la higiene, coadyuvantes y fundamentales para la modernizacin y el
desarrollo de una sociedad, no pudieron lograr su materializacin a travs de las obras de infraestructura satisfactoriamente; tan slo se avanz en el camino modernizador en lo relativo a
la dotacin de energa elctrica para la iluminacin de parques, avenidas y monumentos, ms
all del centro de la ciudad, ya que las obras de introduccin de agua potable y drenaje no se
concretaron, tan slo quedaron en planes.
En las obras de urbanizacin se dio una marcada tendencia hacia la dotacin para la zona norte; se reconstruyeron vas que enlazaban algunas de las colonias establecidas desde la dcada
anterior, como lo fueron la Miguel Alemn, Pensiones, prolongacin del Paseo de Montejo,
Buenavista y Mxico Oriente, stas tres ltimas en franca consolidacin como sede de viviendas
residenciales para personas de alto poder adquisitivo.
En lo referente al crecimiento de la ciudad y la dotacin de equipamientos para servir a las diferentes reas de la ciudad, se dio de manera desequilibrada, se concentraron los servicios en
el centro de la ciudad y se inici su extensin hacia la zona norte. El rubro que tuvo un mayor
desarrollo fue el de salud; la iniciativa privada jug un papel fundamental en la dotacin de este
servicio concentrado en el centro. Ver plano 9.
115
Plano 9. Equipamiento
urbano construido en la dcada de los aos cincuenta
en la ciudad de Mrida.
116
117
mencin alguna de los estudios del arquitecto Mario Pani. Tommasi una vez ms record lo que en
su libro La ciudad de ayer, de hoy y de maana haba sealado acerca de lo que el Plan posibilitara, de las soluciones constructivas cientficas y estticas tendentes a corregir los errores actuales
y evitar los futuros. En el verdadero urbanismo no caben las improvisaciones, la pasin poltica o
la conveniencia personal de las autoridades en turno. Lo bonito debe ser substituido siempre por
lo til, esttico y tcnico, as contrare inteligencias ajenas o lesione intereses particulares,187 en
total congruencia con los principios planificadores de la ciudad moderna. Estos planteamientos
haban sido repetidos una y otra vez, sin muchos resultados, lo que origin que el crecimiento de
la ciudad en parte suscitara nuevos modelos de asentamientos que si bien densificaban algunas
reas habitacionales no proporcionaban los equipamientos necesarios correspondientes.
Leopoldo Tommasi Lpez, Diario de Yucatn, Urbansticas, El Plano Regulador de Mrida, Mrida, Mxico,
11 de noviembre de 1964, p. 3.
118
188
119
Fig. 40 Fraccionamiento
San Miguel, 1963. Imagen
tomada del Diario de Yucatn el 23 de diciembre de
1963, p. 10.
Fig. 41 Imagen tomada del
Diario de Yucatn el 17 de
noviembre de 1964, p.7.
Otras promociones de viviendas con la misma caracterstica de propiciar calles privadas y que
aprovecharon los servicios de la colonia Mxico, fueron la colonia Mxico ampliacin sur, el
Grupo Residencial Los ngeles y el fraccionamiento Miami; con la diferencia de que stas eran
viviendas individuales; con seguridad el emplazamiento para ese momento zona residencial
influy en la decisin.
120
Fraccionamiento Lourdes
Cerca del templo de Lourdes, en la calle 67 entre 34 y 36, se promovi este pequeo fraccionamiento (1965-1966). Cuatro calles se disearon en la mitad de una manzana para distribuir las
viviendas tipo duplex de dos recmaras. Se mencionaba como atractivos del fraccionamiento:
calles pavimentadas, as como servicios de alumbrado pblico y de autobuses, servicios existentes en la zona, adems de la cercana a diversas escuelas y clnicas. Este conjunto se construy
en lotes pequeos y sin espacios para cocheras. Fig. 42 y 43
121
Fig 42 Fraccionamiento
Lourdes. Imagen tomada
del Diario de Yucatn el 9
de diciembre de 1965, p. 9.
Fig. 43 Fraccionamiento
Lourdes. Imagen tomada
del Diario de Yucatn el 24
de junio de 1971.
Fig. 44 Fraccionamiento
Mrida. Imagen tomada del
Diario de Yucatn el 7 de
abril de 1966, p. 9.
Fig. 45 Fraccionamiento
Maya. Imagen tomada del
Diario de Yucatn el 10 de
septiembre de 1965, p. 2.
Fig. 46 Fraccionamiento
Tecnolgico. Imagen
tomada del Diario de
Yucatn el 21 diciembre
de 1965, p. 10.
Fraccionamiento Mrida
En 1966 la constructora Rotesa S. A. ofreci viviendas cerca de la ex hacienda Wallis, al oriente
del centro de la ciudad. De manera similar al fraccionamiento Lourdes, este conjunto se dise
con casas duplex, fraccionando una manzana; se ofrecan en la prensa con luz elctrica y agua
potable en zona fresca; el sector estaba cercano al mercado, colegios, iglesia y se ubicaba a
cinco minutos de la plaza principal. Fig. 44
Fraccionamiento Maya
En la calle 14 del fraccionamiento Chuminpolis, en dos manzanas, la constructora Rotesa ofreci casas duplex (1965) con ventajas como la cercana al Seguro Social, Facultad de Ingeniera,
cervecera, parque de pelota, Casa de la Cristiandad y lnea de camiones. Fig. 45
122
Fraccionamiento Tecnolgico
En la calle 60 norte, a un costado del Instituto Tecnolgico de Mrida, la misma constructora
Rotesa promovi (1966) un conjunto de no menos de 50 casas; para tal fin se traz una nueva
calle en la manzana existente para disear las viviendas tipo duplex. Fig. 46
Los conjuntos habitacionales que fueron resultado de la subdivisin de manzanas en zonas de la
ya consolidada colonia Mxico y que ofrecan casas individuales fueron los siguientes: La colonia Mxico ampliacin sur191 (1965), en donde el criterio fue el mismo y se aprob la infraestructura y los servicios; otra llamada Grupo Residencial Los ngeles,192 con 21 viviendas producto de
la divisin de una manzana en la misma colonia; y el fraccionamiento Miami193 (1966), que se
promocionaba como lo mejor de la ciudad y se ubic en la manzana de las calles 20 y 22 entre
17 y 15 de la mencionada colonia. Figs. 47, 48 y 49
Fig 47 Fraccionamiento
Madrid. Imagen tomada del
Diario de Yucatn el 30 de
junio de 1966, p. 2.
Fig. 48 Colonia Mxico
ampliacin sur. Imagen
tomada del Diario de Yucatn 25 de noviembre
de 1965, p. 6.
Fig. 49 Grupo Residencial
Los ngeles. Imagen tomada del Diario de Yucatn 23
de mayo de 1968. p. 6.
191
123
194
124
Fig. 50 Fraccionamiento
Jardines Miraflores.
Imagen tomada del Diario
de Yucatn el 28 de enero
de 1968, p. 7.
195
125
126
Fig. 52 Fraccionamiento
Jardines de Mrida. Imagen
tomada del Diario de
Yucatn, 19 de julio
de 1970, p. 5.
203
Diario Oficial del Gobierno del Estado Libre y Soberano de Yucatn, 17 de febrero de 1919. Proyecto de Ordenanzas Municipales de Construccin para la Ciudad de Mrida.
127
La construccin de los nuevos conjuntos seguramente debi cumplir con requisitos del ayuntamiento, pero es evidente cmo en la dcada de los aos cuarenta se manejaron criterios diferentes para los proyectos. En algunos casos se ofrecan casas sin cocheras y en lotes reducidos, y se
realizaban en manzanas preexistentes, no hubo ningn instrumento que los normara, en contraste con los nuevos desarrollos que se disearon con amplios espacios pblicos y equipamiento.
Otro aspecto importante fue la inclusin de bancos para el financiamiento de las colonias, lo que
indudablemente asegur la conclusin de ellas, situacin muy diferente a la que se dio durante
la dcada de los cuarenta.
En esta dcada se observ la incorporacin de los cdigos de la arquitectura moderna totalmente
asimilados y apropiados, pero a finales de ella se marc el inicio de la utilizacin de los cdigos
historicistas, como el colonial. En relacin con la traza, apareci un nuevo concepto: el de la
calle cerrada o privada,204 y se incorpor de nuevo el modelo de casas duplex para economizar
terreno; estas viviendas se ofrecieron a estratos sociales medio y medio bajo.
Como se puede apreciar en el plano 10, la tendencia y el crecimiento de nuevos fraccionamientos se dio fundamentalmente en el cuadrante nor-poniente de la ciudad, por un lado, debido a
la tendencia de crecimiento que esa zona ya haba desarrollado, desde la dcada anterior, como
sede de viviendas de mayor estrato socioeconmico, as como de servicios y equipamientos (en
los nuevos desarrollos se les dot de todos los servicios y equipamientos necesarios) y, por otro
lado, para aprovechar los servicios con que esta zona contaba; al sur-oriente se desarrollaron
dos conjuntos habitacionales: la Unidad Habitacional Morelos y el fraccionamiento Jardines de
Mrida, ambos para un nivel socioeconmico medio bajo y bajo, los cuales fueron dotados de
equipamientos y servicios.
204
El trmino cerrada o privada no se refiere a la acepcin actual, en la cual el acceso est restringido a los habitantes del lugar, sino a que se ingresa por un lado y se accede a calles ciegas.
128
129
2.4.2 La infraestructura
Con miras a la modernizacin de la ciudad, se impulsaron obras de infraestructura tanto para vas
de comunicacin como en lo relativo a la dotacin del servicio de agua potable y electrificacin.
130
viviendas residenciales modernas. La fuente, conocida como el plato, fue hecha de concreto
armado asentada sobre tres apoyos metlicos curvos; un atractivo sin duda lo fue el surtidor
central de agua que lanzaba una columna a diez metros de altura iluminada por reflectores de
color rojo y otros que cambiaban de color, as como 99 surtidores de agua que alimentaban la
copa. Fig. 54
131
En el parque de la colonia se construy otra fuente con la misma idea y otros elementos entre
los que sobresali un quiosco contemporneo espacio para sentarse y estar, cubierto lo que
sobresale de estas estructuras fue el manejo del concreto armado explotando sus posibilidades
con espesores en las losas extremadamente delgadas con volados considerables. Fig. 55 y 56
En el otro extremo del Paseo de Montejo, al sur, se iniciaron (1965) obras para su prolongacin209,
proyecto que haba sido estudiado desde fines de los aos cuarenta. Cinco predios o parte de
ellos fueron adquiridos y demolidos, de la manzana sur inmediata al Paseo, en su eje, la comprendida entre las calles 56-58 y 47 y 49. Se public que se proyectaba llegar a la calle 65, afectando nueve manzanas, hasta el parque Eulogio Rosado y que el objetivo era descongestionar
el trnsito y favorecer la mejor distribucin de la creciente zona comercial de Mrida. La va se
llamara avenida Manuel Cepeda Peraza y se proyectaba extender, en otra etapa, a la calle 71.
209
132
El presupuesto para la obra fue de 11 millones de pesos y se estimaron dos aos para concluirla,210
sin embargo, slo se realizaron los trabajos de demolicin de la manzana mencionada. Fig. 57
En el ao de 1972 se trat de nuevo de continuar las obras, pero hubo encontradas opiniones
en torno del proyecto y fueron suspendidas definitivamente.211 Las obras emprendidas slo comprendieron las demoliciones y se dej en ese estado lo que daba mal aspecto al sector; fue hasta
1995 cuando se intervino de nuevo y se dej como una calle, condicin que hoy presenta.
210
211
133
Otra obra importante que se inici en 1965 fue la construccin de la va que va del extremo norte
de la avenida Itzaes con la carretera a Progreso, para posteriormente extenderla hacia la colonia
Mxico; en la prensa se inform que:
Con miras a formar el anillo de circunvalacin de la ciudad, el jefe de Obras Pblicas del Estado manifest () se estudia () construir una avenida que una la glorieta de Henequeneros con la glorieta de
Tanlum, y sta con la carretera a Progreso, a la altura del enlace,212 previa pavimentacin del tramo de
la glorieta de Tanlum a la prolongacin de la avenida Cupules, y () unir por la periferia de la ciudad
la avenida de los Itzaes y las colonias Buenavista y Mxico.213
Este sector del llamado anillo de circunvalacin fue el mismo que plante el arquitecto Mario
Pani y sus colaboradores en la octava proposicin del plano regulador publicado en 1953, al
que se referan como anillo de circunvalacin perifrico.214 Por lo tanto, es casi seguro que
la Oficina de Obras Pblicas haya tomado en consideracin la propuesta de aquel proyecto de
planeacin. Fig. 58
212
Cruce conocido como el enlace, que se ubica entre la mencionada avenida, hoy Circuito Colonias, y la calle 60.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 2 de abril de 1965.
214
Mario Pani et al., Estudios de planificacin sobre Yucatn, sobretiro de la Revista Arquitectura Mxico, Nm.
41, Ciudad de Mxico, 1953, p. 37.
213
134
Una lectura del plano 11 muestra cmo las obras de la seccin del anillo de circunvalacin y la
prolongacin de la avenida Itzaes al sur empezaron a prefigurar lo que ms tarde se convertira
en un circuito que le da la vuelta a la ciudad, conocido hoy como Circuito Colonias, al cual se
conectan los desarrollos habitacionales.
El inters por planificar el desarrollo de la ciudad se analiz tambin (1969) cuando se public
otro artculo que trataba las propuestas que haba realizado el arquitecto Mario Pani y su grupo
de colaboradores sobre el Plano Regulador de Mrida215 (1953); por primera vez en la prensa
se haca referencia al trabajo del arquitecto Pani, haciendo mencin de las proposiciones planteadas y cmo los mismos problemas que se intentaban solucionar en aquel plan se haban
acrecentado, sugiriendo la conveniencia de actualizarlo y no partir de cero. Entre los problemas
ms urgentes se mencionaron el crecimiento desordenado, el problema del transporte pblico,
la falta de estacionamientos, la ocupacin de las calles y la normatividad de uso del suelo.216 Sin
embargo, finaliz la dcada de los aos sesenta cuando en el mundo ya se estaban poniendo en
tela de juicio algunos de los planes reguladores ms innovadores para su momento y la ciudad
de Mrida se haba desarrollado al margen de alguno.
Fue hasta los aos setenta cuando se dio a conocer, durante el Gobierno de Carlos Loret de Mola
Mediz, que un grupo de tcnicos del Centro de Planificacin Unesco Ins realizaba estudios para
conformar el Plano Regulador; dicho proyecto propona entre uno de sus puntos la construccin
del anillo perifrico.217 A inicios del mismo ao se public en el Diario Oficial del Gobierno
del Estado el permetro urbano de la ciudad, que incluy un nuevo Plano Oficial de la Ciudad
de Mrida, obra que coordin el subdirector tcnico del Catastro Sr. Mario Zavala Velzquez.
Por vez primera aparece Chuburn como parte de la ciudad; el documento en poco tiempo fue
215
En 1958, con motivo de una visita que el arquitecto Enrique Manero Pen hizo a la ciudad de Mrida, trajo
varias revistas Arquitectura Mxico, Nm. 41, donde estaban publicados los Estudios de Planificacin sobre Yucatn
y las puso a disposicin del pblico. Adems, se rese en la prensa las proposiciones que se haban planteado, sin
embargo, al parecer esto no tuvo impacto alguno.
216
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 7 de marzo de 1969.
217
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 2 de diciembre de 1970. El grupo de tcnicos del Centro de Planificacin
Unesco Ins estaba conformado por los arquitectos Juan Balades Perber, jefe de la Seccin Tcnica del mencionado
Centro, Raymundo Estrada, Jos Antonio Muoz Heredia y Dr. Ral Von Szalay, coordinadores del mismo.
135
136
superado.218 A fines de 1970 se public el nuevo Reglamento de Construcciones que sustituy las
Ordenanzas de Construcciones vigentes desde 1919; a decir de la Comuna: cuya antigedad
e inoperancia ocasionaron () la anarqua existente en el Municipio en materia de construcciones y urbanizaciones.219
Agua potable
La dotacin de agua potable a la ciudad de Mrida y a otras once poblaciones de Yucatn fue la
noticia que ms acapar la atencin de la localidad en toda la dcada, por su importancia, repercusin, tardanza de los trabajos y por los pagos que tuvo que realizar la poblacin. Los diferentes
intentos de los aos cincuenta al fin se concretaron parcialmente. La Ley de Cooperacin para
las obras de abastecimiento de agua potable para la ciudad de Mrida, decretada en el Diario
Oficial del Gobierno del Estado en 1958, fue derogada (1960) mediante otra ley similar en la
que se exclua al Banco Hipotecario Urbano de Obras Pblicas en la firma del nuevo convenio,
aunque se consideraba que esta institucin otorgara crditos para las mismas; tambin se estipulaban las aportaciones que realizaran el Gobierno Federal a travs de la Secretara de Recursos
Hidrulicos, el gobierno del estado y el ayuntamiento de Mrida para financiar la obra, estimada
en 93 millones de pesos y programada para ejecutarse entre 1961 y 1963. En el citado proyecto
se mencion la necesidad de realizar revaloraciones catastrales220 de los predios en el Estado a
218
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 10 de enero de 1970. Cabe sealar que dicho plano no incluye como parte
de la ciudad la Unidad Habitacional Cordemex.
219
Op. cit., 30 de diciembre de 1970.
220
Con el fin de recaudar mayores recursos para las obras, el Congreso del Estado aprob los siguientes decretos:
el 210, del 31 de julio de 1961, en que se expidi la Ley del Impuesto Predial; al ao siguiente se autoriz al gobierno
para contratar un crdito con Banobras para realizar una recatastracin (decreto 369 de 16 de noviembre de 1962);
en 1962 se expidi la Ley sobre el Rgimen de Propiedad y Condominio Inmobiliario (375, del 22 de noviembre de
1962) y la duplicacin de los valores catastrales de los predios en zonas urbanas del estado (378, del 6 de diciembre
de 1962). Informacin tomada en lnea, URL:
http://www.congresoyucatan.gob.mx/interes/HISTORIA/xxv_legislatura_constitucional.htm obtenida el 27 de noviembre de 2007, 19:00 horas.
137
fin de cubrir parte los gastos;221 el decreto fue publicado en el Diario Oficial el 9 de noviembre
de 1960.222
Varios artculos fueron publicados sobre los beneficios del mencionado proyecto, entre los que
se difundieron estaban los que trataban sobre la calidad del agua, estudios bacteriolgicos de la
misma y sobre la necesidad de no clausurar los pozos artesianos para que sirvieran para el riego
de rboles.223
En marzo de 1962 se dieron a conocer las obras de introduccin del agua potable en Mrida y
diez poblaciones ms de Yucatn y en Chetumal.224 En octubre siguiente se realiz la firma del
contrato de crdito entre Nacional Financiera S. A. y el Banco Interamericano de Desarrollo,
para las obras. El Congreso derog el decreto de noviembre de 1960, relativo a la Ley de Cooperacin para las obras de introduccin de agua potable en Mrida, ya que se decidi entonces
dotar del sistema de agua potable a 12 poblaciones de Yucatn.225 A mediados de 1963 se inform que el contrato para las obras en Mrida fue asignado a la empresa Compaa Mexicana de
Ingenieros y Contratistas.226 Las obras en Mrida al parecer iniciaron en junio de 1963, pero no
resultaron bien programadas, en consecuencia, adems de lentas causaron graves perjuicios a la
221
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 3 de noviembre de 1960. Se public la iniciativa ntegra, que constaba de
19 artculos.
222
Op. cit., 10 de noviembre de 1960.
223
Op. cit., 16 de marzo de 1960.
224
Las obras se realizaran con un prstamo de $124,900,000 otorgados por el Fondo Fiduciario de Progreso Social,
dependiente del Banco Interamericano de Desarrollo, con sede en Washington. informacin del Diario de Yucatn,
Mrida, Mxico,16 de marzo de 1960.
225
Mrida, Progreso, Chelem, Chicxulub, Motul, Valladolid, Tizimn, Espita, Izamal, Maxcan, Ticul y Halach.
Se realiz un convenio entre el gobierno federal, por medio de la Secretara de Recursos Hidrulicos, del gobierno
del estado y los presidentes municipales de las poblaciones indicadas. El proyecto fue estimado en $170,000,000,
financiados por el gobierno federal y estatal y 108 millones otorgados en prstamo por el Banco Interamericano de
Desarrollo (BID). Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 12 de octubre de 1962.
226
El monto total fue para doce poblaciones de Yucatn, y para el alcantarillado y agua en Chetumal, el entonces
territorio de Quintana Roo, el monto fue de 193 millones. Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 17 de mayo de 1963.
Se estimaba que las obras estaran concluidas en 1964.
138
ciudadana al permanecer mucho tiempo expuestas las zanjas, con el consiguiente riesgo para
peatones y conductores, as como la destruccin de pavimentos y aceras.227
En varias ocasiones el ayuntamiento intent suspender las obras dados los graves perjuicios y
atrasos de ICONSA,228 exhortando a la empresa a no abrir ms tramos de zanjas hasta que cerrara las expuestas.229 A mediados de 1966 ya se otorgaba provisionalmente agua potable gratuita
en algunos sectores de la ciudad y se cre la Junta de Agua Potable de Yucatn (JAPY) integrada
por el gerente de la Secretara de Recursos Hidrulicos, el gobernador del estado y el presidente
municipal de Mrida,230 y al mes siguiente se public que ya se reciban solicitudes para otorgar
el servicio.
El Congreso del Estado aprob por unanimidad la propuesta de las tarifas que present el gobernador y entr en vigor el 26 de julio de 1966,231 pero fueron ampliamente criticadas ya que se
consideraban excesivas, injustas y antipatriticas. Una fuerte campaa para aclarar la razn de
los altos cobros fue emprendida por la sociedad,232 lo que oblig al gobernador a suspender el
decreto y proponer otras tarifas mientras se realizaba un estudio socioeconmico.233
Por otra parte, las obras se consideraban inconclusas ya que tan slo se haban reportado 22,000
tomas instaladas en vez de 40,000, y los gastos se repartan entre pocos usuarios;234 numerosas
calles an estaban destruidas; y se propona no cegar los pozos y depsitos de agua de lluvia y
227
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 27 de junio de 1963, en un remitido con fotografas de las obras, se indicaba
el deplorable estado de las calles por los trabajos de la introduccin de agua potable.
228
Compaa Mexicana de Ingenieros y Contratistas; compaa encargada de la ejecucin de los trabajos.
229
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 21 y 27 de abril de 1965.
230
Op. cit., 24 de junio de 1966.
231
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 23 de julio de 1966. Se public el decreto en el Diario Oficial de 25 de julio
de 1966.
232
Op. cit., 28 de julio de 1966.
233
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 27 de septiembre de 1966. En esta ocasin se decidi cobrar por casahabitacin $10 mensuales y para otros giros, tarifas convencionales.
234
Op. cit., 28 de julio de 1967. El 10 de noviembre el Diario de Yucatn public que haban 28,748 usuarios, de
los 38,000 proyectados.
139
no usar el agua potable; tambin se publicaron varias caricaturas235 alusivas al alto costo que se
pretenda cobrar,236 y las sospechas de un gran fraude por parte de las autoridades; pero se sum
al problema la decisin del gobierno federal de cancelar o suspender varios proyectos en el estado, como la construccin de escuelas, del aeropuerto, carreteras, sistemas de irrigacin y dems,
a fin de poder pagar el prstamo con el BID,237 para salvaguardar el prestigio internacional de
Mxico, ya que se consideraba que los yucatecos se negaban a cumplir con los compromisos adquiridos.238 Con seguridad los gastos que el gobierno federal estaba haciendo por la proximidad
de los Juegos Olmpicos de 1968, contribuyeron a este recorte.
Al inicio de la siguiente dcada se inform, luego de varios aos de no saberse, la situacin de
la JAPY,239 que haban instaladas 30,423 tomas, ms 1,523 de la antigua y que estaba recin
adquirida la Refrigeradora Yucateca, compaa que prestaba el servicio de agua potable en parte
del centro de la ciudad.240
El Sistema Mrida, como fue llamado el que otorgaba el servicio de agua potable en esta capital,
abasteca tambin a las poblaciones de Progreso, Chelem y Chicxulub, as como al Complejo
Industrial y Habitacional Cordemex y al Puerto de Abrigo Yucalpetn.241 La JAPY tambin otorg
el servicio a las colonias Pensiones y Miguel Alemn, que fueron las primeras que contaron con
sus propios sistemas de abastecimiento de agua, pero que carecan del adecuado proceso de
235
140
limpieza, ya que contena mucho cloro, cal e incluso se difundi que en dichas colonias, antes
de integrarse al servicio, se consuma tambin agua de lluvia.242
El proyecto de alcantarillado
Al presentarse el proyecto de dotacin de agua potable de la ciudad en 1952, se incluy tambin
uno de alcantarillado que propona ubicar la planta de tratamiento en el norte de la ciudad, al
otro extremo de los pozos de abastecimiento de agua potable.243 Sin embargo, el proyecto no se
concret. En la asamblea donde se trat el asunto del agua potable y del drenaje se dijo que al
dotar a la ciudad de agua potable, el problema del drenaje quedaba resuelto, porque se podran
emplear los pozos colectores sin ningn problema;244 al parecer, este punto de vista prevaleci
para que de manera oficial se descartara el proyecto del alcantarillado y se siguiera empleando
el sistema de fosas spticas y pozos para el desalojo de aguas negras.
En el problema del drenaje colectivo de la colonia Miguel Alemn en 1958, se recomend construir grandes fosas spticas,245 opcin que se consider viable y que seguramente influy en las
autoridades para olvidar el proyecto de alcantarillado de Mrida. El doctor Francisco Sols Aznar
concedi varias entrevistas y escribi sobre ambos proyectos agua potable y alcantarillado
en 1960 se lamentaba que las autoridades ignoraran el servicio de alcantarillado: Yo creo que
instalar el servicio de agua ignorando el alcantarillado es un error grande del cual nos habremos
de arrepentir (), si no se hace, pasarn muchos aos para que se realice, con la consiguiente repercusin que eso tiene para la ciudad. No se tiene el concepto de que tanto el servicio de agua
como el alcantarillado constituyen una necesidad vital246 e indispensable para la higiene. Sin
embargo, este proyecto no se concret.
242
141
El alumbrado y la electrificacin
Durante la dcada los aos sesenta, la Comisin Federal de Electricidad realiz en coordinacin
con el ayuntamiento de la ciudad, representado por una Junta de Electrificacin, intensos trabajos que en 1967 permitan afirmar que se lograra la cobertura elctrica de todas las colonias de
la ciudad; con motivo de la atencin a las colonias Bojrquez y Francisco I. Madero, ltimas dos
colonias que quedaban, se dijo: las 26 colonias de que consta la ciudad contarn con este
importante servicio elctrico, tanto para la iluminacin de sus calles, como para sus casas.247
El servicio de alumbrado pblico tipo mercurial tambin se extendi por toda la ciudad;248 este
sistema fue empleado preferentemente en la iluminacin de avenidas y calles principales, como
en el Paseo de Montejo, avenida Salvador Alvarado, calles 59 y 60 y dems, as como en el primer cuadro, comprendido entre las calles 50-70 y 47-69.249
En sntesis, tenemos que para la dcada de los aos sesenta, la planificacin de la ciudad a
travs de un Plano Regulador fue otra vez objeto de numerosos intentos para concretarse, ya
fuera por parte de las autoridades, que emitieron una nueva Ley de Planificacin del Estado de
Yucatn que abrog la emitida en 1945, o por parte de diversos sectores de la sociedad, sin
consecuencia alguna.
Y como lo hizo en mltiples ocasiones durante la dcada de los aos cincuenta, el arquitecto
Leopoldo Tommasi Lpez pugn por el mencionado Plano Regulador; sin duda alguna el arquitecto Tommasi puede considerarse como uno de los principales promotores ya que desde
el papel que le tocara desempear, como profesionista, ciudadano o funcionario de gobierno,
siempre pugn por la concrecin de un Plan Regulador que permitiera practicar un verdadero
urbanismo ms all de lo poltico y lo personal, en donde lo bonito fuera sustituido por lo til,
esttico y tcnico.
247
142
Las caractersticas del suelo de la pennsula, una gran laja, hacen muy difciles u onerosas las obras, motivo por
el que seguramente no se hizo.
143
Equipamiento de salud
En el rubro de salud, si bien la iniciativa privada continu con la tendencia desarrollada desde
la dcada pasada con otras acciones importantes, fue el Estado el que hizo las inversiones ms
fuertes en este rubro.
La iniciativa privada construy en el centro de la ciudad: la Central Peditrica (1965), (Fig. 59),
diseo y obra del ingeniero Fernando Roche Martnez; la Central Quirrgica (1966) (Fig. 60),proyectada por el ingeniero civil Hugo M. Espsitos F., la primera fue una de tantas obras que se
insertaron en una esquina con un lenguaje pobre, en donde tan slo se ordenaba la composicin
acusando la horizontalidad de cada piso por el manejo de las marquesinas; por su parte, en la
Central Quirrgica el tratamiento espacial y tcnico otorgado obedeci a los cdigos modernos y
a los aspectos climticos del lugar; una acusada horizontalidad en los diferentes elementos de la
fachada, el volumen volado sobre el piso inferior y la utilizacin de parteluces como proteccin
de la insolacin del sur; en relacin con el alineamiento con el paramento, de manera intencionada rompi con l para dar paso a una vestibulacin hacia el edificio.
En la avenida Itzaes, en el extremo norte y cercano al Hospital de Ejidatarios Henequeneros, se
construy con financiamiento privado la Clnica de Mrida, primera en la ciudad que reuna
varias especialidades, maternidad y hospitalizacin; el proyecto y obra lo realizaron el arquitecto Fernando Garca Ponce y los ingenieros lvaro Ponce Pen y Ulises Gonzlez Torre; en
ella se incorporaron todos los cdigos de la arquitectura moderna, logrndose una composicin
armoniosa y congruente con el sitio, uso y orientacin, sta fue una clnica ms que se sum a
la consolidacin de esa zona.251 El comercio relacionado con la salud tambin se desarroll y en
1967 surgi una de las primeras cadenas comerciales local dedicada a medicamentos, la Canto
Distribuidora, que de igual manera hizo lo propio en el centro de la ciudad y alter el entorno
urbano al remeter el edificio del paramento para dar lugar al estacionamiento y plante un lenguaje nuevo.
251
144
Por parte del gobierno se construyeron tres importantes obras: a) la Unidad Mrida del Instituto
Mexicano del Seguro Social (IMSS), en los terrenos conocidos como El Fnix, proyecto realizado
por el arquitecto Eduardo Graue Bacmeister, de la misma dependencia,252 que cont con Centro
de Seguridad Social para el Bienestar Familiar (Casa de la Asegurada), teatro, delegacin administrativa, clnica, hospital, almacenes, casa de mquinas, planta para tratamiento de agua para
cisternas y cobertizos para ambulancias y transporte (Fig. 61); b) rea de consulta externa del
Hospital 20 de Noviembre,253 proyecto de la Secretara de Salubridad y Asistencia, con la finalidad de adaptar y actualizar fsica y funcionalmente los servicios mdicos, principalmente los de
especialidades (Fig. 62 y 63). La obra estuvo a cargo del la Compaa Constructora CUFAC del
ingeniero Antonio Uribe Gonzlez y se construy en una seccin del antiguo Hospital de Henequeneros; ambas obras fueron inauguradas en 1962, y c) el Instituto de Seguridad y Servicios
Sociales de los Trabajadores del Estado, ISSSTE (1967), en la colonia Pensiones (Fig. 64). Todos
estos servicios de cobertura regional, importantes por los servicios de consulta externa, especialidades, hospitalizacin y dems servicios que prestaban a los derechohabientes.
252
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147
Equipamiento educativo
Respecto de las instituciones educativas, despus de mucho aos, en 1960, se concluy el Instituto
Tecnolgico de Mrida y fue puesto en operacin al ao siguiente, gracias al convenio firmado entre el gobierno del estado y el Comit de Administracin de Escuelas Federales CAPFCE en 1959,
as como la Secundaria Federal Nm. 1 (1964). En esta dcada se llev a cabo la descentralizacin
de varias carreras de la Universidad de Yucatn, concentradas en el edificio central de la misma: la
Facultad de Ingeniera Civil (1960) y las Escuelas Preparatoria y de Qumica, ambas en1965, que
ocuparon los terrenos donados por el gobierno del estado, en la zona conocida como El Fnix.
Por parte de la iniciativa privada, otra orden religiosa, la de las hermanas Maryknoll, construy su
nuevo edificio al norte de la ciudad en la colonia Buenavista, el colegio Rogers Hall o Peninsular;
cre un complejo con todos los niveles de estudios, desde jardn de nios hasta preparatoria,
convirtindose en el primero que lo haca desde que en el ao de 1945 el gobierno promoviera
el Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto en donde congreg varios niveles de estudios. ste
fue proyectado por el ingeniero Fernando Roche Martnez; en l se emplearon todos los cdigos
de la modernidad, tanto espaciales, funcionales, expresivos y constructivos, y con una particular
disposicin que permita un control de todas las reas.
La especializacin en los estudios tambin requiri de inmuebles para su uso; as, la Escuela
Comercial Bancarios, especializada en estudios comerciales, construy sus instalaciones (1966
y 1967) en el barrio de Santa Ana en la calle 62. Lo mismo hizo la Alianza Francesa (1969), para
impartir la enseanza de ese idioma; se desconoce el autor de la obra, sin embargo, se puede
deducir que se intent plasmar en l un significado cultural, se plante un edificio orgnico con
tratamiento plstico y espacial tanto en el exterior como interior, sin duda notable, pero su emplazamiento fue en el tejido del centro de la ciudad y rompi totalmente con lo establecido. Otra
obra importante de la iniciativa privada en la zona de la colonia Miguel Alemn fue el centro
escolar del mismo nombre, obra del arquitecto Fernando Ponce Garca y de los ingenieros Ulises
Gonzlez Torre y lvaro Ponce Pen; en ste se congregaron un jardn de nios y una primaria,
as como residencias para los maestros.
148
149
Como se aprecia en el plano 13, la directriz fue la concentracin de stos en la zona nor-oriente
de la ciudad; la descentralizacin de la Universidad hacia la zona de El Fnix propici que esa
rea se consolidara como zona educativa, sumndose a otras acciones en el rubro de educacin,
as como a las instalaciones de la Unidad del IMSS.
Equipamiento comercial
En lo referente al comercio, se realizaron acciones por parte del gobierno del estado, dotando a
dos barrios histricos de nuevos mercados, el Santos Degollado (1964) en el barrio de Santiago,
obra del ingeniero Rubn Encalada Alonzo (Fig. 65); y el Chem Bech (1969) en el suburbio de
Chuminpolis (Fig. 66); en el centro se construy el bazar Garca Rejn y el mercado para ambulantes adjunto al mercado municipal con el fin de acabar con el problema del ambulantaje
que padeca la zona.
Por su parte, la iniciativa privada emprendi la descentralizacin del comercio del centro hacia
otras zonas fuera de los barrios histricos, y construy en1963 el primer centro comercial llamado Minimax, nombre de la cadena de los supermercados, proyecto del arquitecto Juan Jos
Daz Infante y obra de los ingenieros lvaro Ponce Pen y Ulises Gonzlez Torre. El centro comercial tena un supermercado tipo americano, con autoservicio, y varios locales congregados
en un solo terreno ubicado en la avenida Coln con la calle 62; al ao siguiente, los mismos
150
empresarios cambiaron la razn social y crearon los supermercados Komesa, dotando a varias
zonas de la ciudad con ellos, en el barrio de Santiago (1964) proyecto del arquitecto Juan Jos
Daz Infante; en la colonia Mxico (1966); en la colonia Alemn (1967), proyecto del arquitecto Fernando Garca Ponce; y en 1969 en la colonia Garca Giners, proyecto del arquitecto
Erick Daz Palma; todos los supermercados fueron construidos por los ingenieros lvaro Ponce
y Ulises Gonzlez Torre. El tratamiento formal y la distribucin fue muy similar en todos los
casos: una gran bodega con transparencias para mostrar los productos. La importancia no fue a
su arquitectura, sino a la dotacin de este equipamiento comercial en zonas en donde el Estado
no haba proporcionado o exigido el servicio a los promotores de esas reas habitacionales.
Otra inclusin de este tipo de equipamiento se construy frente al parque de Itzimn: el centro
comercial llamado La Abeja, que era, a decir de los promotores, un drug store al estilo norteamericano, abierto de noche y da, con mltiples departamentos en donde se podan encontrar
desde medicinas y ropa hasta verduras y cmaras fotogrficas, entre otras cosas. Los promotores
argumentaron que ste vena a cubrir una importante funcin en esta zona de la ciudad, una
accin ms para consolidar a la zona norte de la ciudad. Fig. 67
Un anlisis muestra cmo el equipamiento comercial promovido por la iniciativa privada aparece en aquellas zonas en donde no haba llegado ese servicio, constituyndose en un desahogo
para los mercados del centro y los barrios histricos. Ver plano 14. Sin embargo, esta situacin
sera prcticamente exclusiva para la zona norte de la ciudad.
151
152
153
farmacia, tiendas y salas de espera. El edificio fue resuelto con los cdigos de la arquitectura moderna: destacan en lo formal el tratamiento de las bandas horizontales en cristal y slido, y en lo
tcnico, por la utilizacin fundamentalmente de la estructura de paraguas invertidos empleados
en los andenes. (Fig. 68 y 69)
Fig. 68 Terminal de la
Unin de Camioneros de
Yucatn. Imagen tomada
del Diario de Yucatn, 25
de mayo de 1968, p. 2.
Arq. Fernando Garca
Ponce e Ings. lvaro
Ponce Pen y Ulises
Gonzlez Torre
Fig. 69 Terminal de la
Unin de Camioneros de
Yucatn, archivo del Ing.
lvaro Ponce Pen.
Arq. Fernando Garca
Ponce e Ings. lvaro
Ponce Pen y Ulises
Gonzlez Torre
154
En las primeras dos son evidentes los cdigos formales utilizados, la presencia de las superficies
acristaladas, los elementos ligeros, el acuse de losas para acentuar la horizontalidad, entre otros
aspectos, los cuales denotaban su tendencia hacia la arquitectura moderna; fueron las cualidades de los proyectistas los que marcaron una diferencia entre ellos; se puede apreciar una composicin, un equilibrio entre el juego de lneas y lneas en la sede de la Delegacin de Trnsito
Federal, a pesar de que el diseo evoca ms a las casas que el arquitecto Garca Ponce realiz en
el norte de la ciudad. En relacin con el edifico de Planeacin,255 el lenguaje empleado correspondi al manejo de la caja suspendida sobre pilotes, en donde indiscutiblemente prevaleci el
valor del volumen.
Equipamiento industrial
La industria logr en esta dcada su consolidacin; desde finales de los aos cincuenta los industriales yucatecos, a travs de la Asociacin de Industriales de Yucatn, A.C., iniciaron una campaa para incentivar el consumo de los productos elaborados en Yucatn,256 al verse amenazados
255
155
ante la inminente llegada de productos del centro del pas, ante la apertura de la va ancha del
ferrocarril de Campeche-Mrida257 y la peticin de los transportistas de terminar los tramos de la
carretera Mrida-Mxico258 que faltaban para unir el estado con la capital; la llegada de productos del centro fue bloqueada por las autoridades como apoyo a los industriales yucatecos hasta
mediados de la dcada de los aos setenta. Estas condiciones permitieron la consolidacin de las
industrias yucatecas que en los aos cincuenta haban hecho inversiones importantes.
Como parte de las acciones que el Estado llev a cabo para el apoyo de la industria local, se
cre en 1964 la Comisin de Fomento Industrial con la finalidad de estudiar y promocionar
proyectos tendentes al desarrollo del estado, as como la concesin, vigilancia y cancelacin
de franquicias fiscales para industrias nuevas. En funcin de esto, el Estado otorg franquicias
fiscales a nuevas industrias dedicadas a conservas, hules, acumuladores, industrializacin del
maz, entre otras.259
La paraestatal Cordemex fue creada a fines de 1961 con la finalidad de tener un organismo
que asegurara al mejor precio la venta de la produccin del henequn y, por consiguiente, el
mayor ingreso de divisas al estado. Por ello se construy en la carretera a Progreso un complejo
industrial cordelero cuyos objetivos tendan a la disminucin de los precios del henequn y a la
modernizacin de sus procesos administrativos y equipos de industrializacin. Cuando empez a operar la empresa paraestatal, haba en la entidad alrededor de 40 fbricas, de las cuales
cuando mucho siete posean equipos adecuados para producir hilos agrcolas con la calidad que
exiga el mercado internacional. Con el programa de reorganizacin de la planta industrial, las
257
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 15 de mayo de 1957. Despus de Henequeneros de Yucatn (1938-1955),
el Estado asumi parte de la responsabilidad de integrar a la entidad a la economa nacional a travs de inversiones en
la infraestructura por lo que, en 1958, pas a manos del gobierno federal la empresa Ferrocarriles Unidos de Yucatn,
S.A. despus de 40 aos de ser propiedad del gobierno local. De este modo surgi Ferrocarriles Unidos del Sureste S.A.
de C.V. que enlaz a la pennsula mediante la corrida Coatzacoalcos, Veracruz, a Mrida. Arcadio Sabido Mndez, Los
hombres del poder, monopolos, oligarqua y riqueza en Yucatn: 1880-1990, Ediciones de la Universidad Autnoma
de Yucatn, 1995, p. 185.
258
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico,1 de junio de 1957.
259
II Informe de Gobierno del C. Luis Torres Mesas, gobernador constitucional, ante la H. XLIII Legislatura del
Estado, del 1 de febrero de 1965 a 31 de enero de 1966, Mrida, Mxico, 1966, p. 117.
156
plantas ms chicas y con maquinaria antigua se fusionaron con otras ms grandes; este proceso
se desarroll durante toda la dcada de los aos sesenta, hasta que en 1969 slo quedaban cinco
fbricas de las originales, por lo que se concentr el equipo de industrializacin, lo que motiv
una disminucin en los costos de produccin y un aumento de la productividad. En medio de
este proceso, en el ao de 1965, la industria del henequn ya comenzaba a tener problemas y
tuvo que soportar el derrumbe de precios en el mercado internacional.260
El complejo Industrial denominado Centro Industrializador del Henequn General Salvador Alvarado estuvo constituido por fbricas de a) tapetes, b) sacos y telas, considerada como la ms grande del mundo; c) fbrica de productos especiales, una mezcla de manufacturas de fibras duras
con fibras artificiales, y d) de hilos y jarcias. Complementaban el Centro las oficinas centrales, una
casa para visitas, ocho casas para tcnicos y la unidad habitacional, con 26 locales para comercios, la tienda Conasupo, el edificio de cultura y artesanas, una agencia bancaria, un club obrero
social, teatro-cine, un centro escolar, un templo religioso y oficinas de correos y telgrafos.261
Las fbricas se alojaron en numerosas naves industriales construidas con mampostera y techadas
con trabelosas. Otras instalaciones que se construyeron para la misma industria fueron bodegas;
en 1966 se construyeron tres en los terrenos conocidos como El Enlace, para el Banco Agrario
de Yucatn, destinadas al almacenaje de la fibra ejidal, con el fin de evitar pagos por estadas de
camiones y rentas (Fig. 72). La obra estuvo a cargo del ingeniero Jos Cardea.262
La iniciativa privada tambin entr a un proceso de modernizacin, la Galletera Dond cambi
su nombre por el de Productos de Harina S.A. (1960), moderniz su maquinaria y construy
una nueva planta en el mismo lugar de su ubicacin original, en la avenida Itzaes con Coln;
el proyecto lo realiz el arquitecto Flix Mier y Tern y los ingenieros Franz R. Fortuny y Manuel Rodrguez Pen (Fig. 73). El arquitecto Mier y Tern utiliz un lenguaje moderno orgnico,
combinando las superficies limpias y lisas del concreto con la piedra, distinguiendo los distintos
260
157
planos de las lneas de los volados con acentuada horizontalidad. La nave que aloj la maquinaria nueva se construy de block vibroprensado y se tech con el sistema de trabelosas.
Fig. 72 Bodegas en
El Enlace, para fibra de
henequn ejidal.
Fig. 73 Productos de
Harina, S. A. Dond.
Imagen tomada del Diario
de Yucatn, el 8 de diciembre de 1960, p. 7.
Arq. Flix Mier y Tern e
Ings. Franz R. Fortuny y
Manuel Rodrguez Pen
158
La industria refresquera, que desde los aos cuarenta haba tenido una presencia importante
en el estado, instal nuevas plantas; en 1961 se inaugur la Planta Embotelladora del Sureste,
S.A. de los refrescos Pepsi Cola,263 proyecto de Flix Mier y Tern y obra de Franz R. Fortuny; la
nueva planta para la Embotelladora Peninsular, S.A. (1962) de los refrescos Coca Cola y Cristal,
proyecto y obra del arquitecto Fernando Garca Ponce e ingenieros Ulises Gonzlez Torre, lvaro
Ponce Pen y Enrique Rincn Edgerton; ubicadas en la avenida Internacional y la Itzaes, respectivamente, ambas camino a la salida de Campeche. Es notoria la similitud que guardaban entre s,
en ellas se utiliz una gran cristalera inclinada y volada hacia el frente para mostrar las mquinas
embotelladoras, con pronunciada horizontalidad y acuse de lneas; en las dos se utiliz la trabelosa, pero en la Pepsi Cola se integr a su expresin formal en fachada. Fig. 74 y 75, 76
263
159
Otras industrias que construyeron sus plantas fueron: la Embotelladora Juguito, frente al Parque Carta Clara;264 Koki-Lac, en la avenida Itzaes;265 del rubro de la construccin, la fbrica de
bloques Materiales Itz, en la carretera a Caucel; proyecto y obra del ingeniero Mario Duarte
Carrillo;266 y la planta de la destilera Modelo (1964), del arquitecto Fernando Garca Ponce y
los ingenieros Ulises Gonzlez Torre y lvaro Ponce Pen; la Planta Dosificadora de Hormign
Premezclado, del mismo ingeniero Duarte;267 Entre los edificios de apoyo para las industrias y
el comercio estuvieron las bodegas y varias de ellas se ubicaron en la antigua carretera a Progreso, entre ellas se cuentan las oficinas y bodegas de la Sucursal Nestl en 1961, del arquitecto
Flix Mier y Tern y Franz Fortuny, y las Bodegas Moctezuma del Sureste, S.A.268 (1964) en la
avenida Aviacin.
En esta dcada la industria comenz a alejarse del centro y de las reas densamente pobladas. Ante la ausencia de un Plano Regulador que normara su ubicacin, algunas se asentaron sobre el camino hacia la ciudad de Campeche y las otras en el permetro de la ciudad.
Ver Plano 15
Equipamiento religioso
El equipamiento religioso se construy en algunas de las colonias que haban iniciado su construccin en la dcada de los aos cuarenta; lo anterior y el incremento de la poblacin en los
aos precedentes llev a los prelados de la Iglesia catlica a marcar nuevas delimitaciones parroquiales y con ello a la ereccin de nuevos templos. En 1961 se inici la parroquia santuario
Sagrado Corazn, en la colonia Alemn; el mismo ao, el santuario del Santo Nio de Atocha,
en la colonia Sarmiento; en 1965 la capilla de la Casa de la Cristiandad; al ao siguiente la capilla de San Martn de Porres y la Santsima Trinidad, en la colonia Castilla Cmara; y en 1967
264
160
161
se inici la construccin del santuario del Divino Redentor, en la colonia Pensiones. La calidad,
expresividad y los aspectos tcnicos empleados en la construccin de ellas fueron muy variados
y dependi fundamentalmente de las posibilidades de los constructores.269
162
un edificio funcional y moderno que cont con saln de boliche, baos de vapor para damas y
para caballeros, alberca para natacin, bar, restaurante, pista de baile y campo de golf. Fig. 78
Por su parte la industria refresquera, la embotelladora Coca Cola, inaugur iniciando la dcada
del 70 su saln de Fiestas, el jardn Coca Cola273, el proyecto fue realizado por el arquitecto Gabriel Baqueiro Rojas y se ubic en la avenida Aviacin.
273
163
Los distribuidores de autos destacaron en esta dcada por la construccin de numerosas agencias
de autos. La presencia de estos edificios fue significativa, no slo por el nmero sino por el lugar
de emplazamiento. Se construyeron 10 edificios para este uso y el emplazamiento principal fue
en dos sitios: en la prolongacin del Paseo de Montejo y en la avenida Aviacin, la primera zona
exclusiva de grandes residencias del Porfiriato, que con la inclusin de estos edificios comenz
su cambio a uso comercial y de servicios, y la segunda en la avenida Aviacin, las cuales se sumaron a otros equipamientos instalados all a lo largo de toda la salida hacia Campeche.274
Equipamiento bancario
Los servicios bancarios como instituciones de crdito tuvieron en esta dcada un desarrollo relevante; al menos seis edificios de diferentes instituciones se construyeron para este fin; el lugar
que eligieron para su emplazamiento obedeci a la intencin de cubrir el servicio, ubicndolos
en las zonas de concentracin de actividades tal fue el caso del centro de la ciudad, lugar de
alta concentracin de comercios y servicios y otras reas de la ciudad que estaban en consolidacin o en vas de ello, como el Paseo de Montejo, la colonia Garca Giners y la Unidad
Habitacional Cordemex; con esto se inici la salida de estos servicios hacia el norte de la ciudad.
Los giros de estas instituciones fueron en diversas direcciones, ya fuera como bancos comerciales
o especializados.
A pesar de que algunos de los bancos comerciales que se ubicaron en el centro de la ciudad lo
hicieron con diseos de calidad, con un manejo plstico formal, tcnico y funcional adecuados,
portadores de la idea de modernidad, su insercin en el tejido histrico del centro represent la
destruccin de ste. El espacio urbano se alter y los aspectos ms comunes fueron el desalineo
del paramento para dejar al frente un espacio para el estacionamiento y en el edificio se incorporaron los cdigos arquitectnicos modernos. Entre ellos estuvieron: el Banco Hipotecario de
Mrida (1965), que con motivo de cumplir 10 aos en Yucatn construy su nuevo edificio ubicado en la calle 65 N 508, diseo y obra del arquitecto Fernando Lpez Escalante e ingeniero
274
164
Agustn Pen de Regil; el Banco Comercial Peninsular S. A. (1969), en la calle 65 entre 60 y 62,
y la Sucursal Bazar del Banco Nacional de Mxico (1967). Fig. 79 y 80
Los que iniciaron el xodo hacia el norte de la ciudad, sobre el Paseo de Montejo, fueron las
sucursales del Banco del Sureste (1960) y del Banco del Comercio de Yucatn (1966). El Banco
del Sureste se ubic en el cruce de la calle 47, ste respondi a la esquina con una marquesina
curva que unific las dos fachadas con respuestas diferentes, un juego de volmenes sobre la
avenida y al sur un tratamiento lineal conformado por una sucesin de franjas producto de las
ventanas, y las losas proyectadas hacia el frente y a nivel del piso la volumetra compleja gravitaba sobre unos delgados soportes, sin duda un tratamiento moderno. Los funcionarios del banco
destacaron que entre los clientes ms beneficiados por la apertura de la sucursal en el nuevo
emplazamiento estaran las damas al no tener que ir hasta el centro y tener el problema del estacionamiento y el peligro que implicaba ste. Fig. 81
Del Banco de Comercio de Yucatn, los propietarios declararon: El banco de Comercio, que es
un banco con ideas modernas, estaba en busca de un local nuevo, funcional, de nuestro tiempo,
que resultase en las afueras como una prolongacin de las magnficas oficinas en que est instalado el Banco de Comercio de Yucatn en el rin de nuestra urbe (). Y esta idea moderna
165
se ha concretado en este local del Paseo de Montejo.275 En el discurso estaba clara la idea de
expansin hacia las nuevas zonas consolidadas en el norte de la ciudad, el establecimiento en
esta arteria posibilitaba una mayor comodidad para el usuario al no tener que desplazarse hasta
el centro para contar con el servicio. Fig. 82
Los otros bancos que se ubicaron en otras zonas del norte fueron el Banco Agrario (1967), en la
colonia Garca Giners y en la Unidad Habitacional Cordemex otra sucursal de Banco de Comercio de Yucatn, S.A. (1970).
166
se estaban construyendo en otras poblaciones del interior, como Valladolid, Tizimn, Progreso e
Izamal, as como las acciones de mejoramiento de las terminales de transporte realzadas por la
Unin de Camioneros, que sin duda alguna perfilaban que Yucatn muy pronto contara entre
sus renglones de ingreso principal la industria del turismo.276
El gobierno inici un plan de diversificacin econmica en el cual inclua de manera importante al turismo, reconociendo el error histrico de centrar la actividad econmica principal en
el monocultivo del henequn, teniendo en el estado numerosos atractivos naturales y riquezas
arqueolgicas. Como parte de las acciones que el estado realiz en este rubro, estuvo la construccin del Balneario Popular ubicado entre los puertos de Progreso y Chelem (Fig. 83), para
proporcionar a las clases humildes un lugar de veraneo y esparcimiento, pero tambin un atractivo ms para el turismo regional y extranjero.277
El proyecto lo realiz el arquitecto Fernando Lpez Escalante y fue una obra de arquitectura
moderna, de l sobresali el puente que cruzaba por encima de la carretera hacia el rea principal, acondicionada para reuniones y otros actos sociales y que, adems, era un mirador hacia
el mar.
276
I Informe del C. Luis Torres Mesas gobernador constitucional ante la H. XLIII Legislatura del Estado, 1 de febrero
de 1964 a 31 de enero de 1965, Mrida, Mxico, 1965, p. 17, 18.
277
I Informe del C. Luis Torres Mesas gobernador constitucional ante la H. XLIII Legislatura del Estado, 1 de febrero
de 1964 a 31 de enero de 1965, Mrida, Mxico, 1965, p. 14-16.
167
El proyecto recibi por parte del arquitecto Tommasi una frrea crtica, ya que consideraba fuera
de contexto su diseo, propio para una zona del Mediterrneo, y que no se haban considerado
los gastos de mantenimiento a futuro, segn escribi: Ante el balneario de Chelem, Nervi protestara por tanta obra muerta; Gropius, por la abundancia de adjetivos formales; Le Corbusier, por el
abuso de encastres cubistas, y Mies Van de Rohe, por las siluetas olmpicas que exaltan los valores
estticos como nico fin. Es un alarde de posibilidades tcnicas con ms nfasis que sobra sinceridad, ms prolijidad que sinceridad, ms elocuencia expresiva que anatoma de las formas.278
Por su parte, la iniciativa privada construy una cantidad importante de hoteles, al menos 12, de
diferentes categoras. La mayora de ellos se asentaron en el centro y los barrios con la finalidad
de cubrir no slo la necesidad turstica sino tambin la del alojamiento por trabajo, salud y comercio. Mrida, en esta dcada, ya contaba con una amplia infraestructura en salud, comercio
y otros servicios ubicados en el centro y stos tambin cubran las necesidades de los estados
vecinos. Una caracterstica de estos hoteles fue la irrupcin de torres de varios niveles que modificaron el espacio urbano, antecedente que no se haba tenido.
Entre los que construyeron una torre se encontraban el hotel Panamericana de Mrida (1962),
para ste se utiliz una casona porfiriana de gran calidad formal y espacial, en ella alojaron el
vestbulo, recepcin y otros servicios; en la parte posterior se construy una torre de 10 pisos que
alberg 110 cuartos. El hotel fue planeado con instalaciones de lujo y cont con piscina, sala de
fiestas y restaurante, entre otros servicios. A pesar de haberse construido la torre en el corazn
de la manzana, sta se percibe an en la actualidad desde el espacio urbano, por la gran
altura que contrasta con la del resto de las edificaciones. El planteamiento de respetar la casona
existente fue interesante, sobre todo en una dcada en donde se estaban destruyeron numerosos
predios en el centro. (Fig. 84)
El hotel Mara del Carmen (1965), proyecto y obra del arquitecto Fernando Lpez Escalante y el
ingeniero Agustn Pen de Regil, se construy en la calle 63 Nm. 550, centro; el edificio const
278
Leopoldo Tommasi Lpez, Urbansticas, Un balneario olmpico en Chelem II, Diario de Yucatn, Mrida,
Mxico, 15 de octubre de 1964, p. 3.
168
de dos torres, la ms alta con planta baja y cinco pisos; proyectado con 72 habitaciones y otros
servicios; se present como un edificio moderno y funcional, contribuye al mejor aspecto de
Mrida,279 ste rompi con la fisonoma del centro, alterando las caractersticas propias del sitio,
la inclusin de las torres, el desalineo con la calle y los materiales, entre otras cosas. (Fig. 85)
En el hotel Casa del Balam (1967), del arquitecto Enrique Manero Pen, al igual que en el Panamericana, se mantuvo la casa antigua, que aloj el acceso principal y otros servicios; y se edific
en la esquina una torre de 7 pisos; el volumen se remeti en planta baja para dejar suspendida
la gran caja, a pesar del planteamiento con arcos en planta baja, sin duda alguna el tratamiento
an acusaba la expresin funcionalista. (Fig. 86)
El Autel 59 (1969), ubicado en la calle del mismo nmero, fue proyecto y obra de los ingenieros
Augusto Flores Hijuelos y Fernando Novelo Castro, quienes plantearon un juego de volmenes
curvos y rectos, con las bandas caractersticas de la arquitectura funcionalista, as como la incorporacin de elementos curvos apergolados, invadiendo el espacio pblico; en congruencia
279
169
con los aspectos climticos, cerraron las bandas acristaladas al poniente y fueron abiertas al
norte. Fig. 87 Los mismos autores en 1970 realizaron el hotel El Castellano, dispusieron el edificio remetido del paramento sin establecer lmite alguno con el espacio urbano y plantearon
un prtico con arcos y contrafuertes con piedra de la regin; ubicaron la torre al interior de la
manzana, la que desarrollaron a base de bandas distintivas de la arquitectura funcionalista. Evidentemente en el tratamiento de la Casa del Balam y el Castellano se empezaron a introducir
otros cdigos relacionados con los regionalismos, evocando lo colonial. Fig. 88
Por otro lado, se inici la construccin del primer hotel en el Paseo de Montejo, el cual llev el
mismo nombre de la avenida (1969); la obra estuvo a cargo de la constructora Rotesa; sta pas
por algunos problemas con el ayuntamiento debido a que no respetaban el alineamiento para las
edificaciones en esa arteria; el edificio se acercaba a un metro de la acera cuando deba respetar
cinco y el volado de la entrada principal se proyectaba sobre la misma, sostenido por un arco
que se asentaba sobre la acera en plena va pblica. Ello dio pie a la suspensin de la obra, sin
embargo, poco despus las autoridades declararon a la prensa que: teniendo en cuenta que
la propia obra es conveniente para el turismo que visita nuestra ciudad, as como el esfuerzo
econmico que su realizacin significa, pero tambin por otra parte, que es preciso sentar un
170
precedente para evitar abusos similares que acaben con la belleza de nuestra avenida principal,
no ha ordenado que la construccin sea demolida, pero se ha impuesto una multa.280 A pesar
de que no se demoli el edificio, el hecho fue significativo ya que represent por primera vez
una posicin de las autoridades ante las arbitrariedades que se cometan en las zonas histricas,
especialmente con la invasin del espacio pblico. Fig. 89
Otros hoteles de dimensiones menores se construyeron en el centro, para alojar a las personas
que venan a utilizar los servicios que la ciudad de Mrida proporcionaba. Lo relevante de stos
no fue su calidad arquitectnica, ya que sta fue en general escasa o nula, sino la aparicin de
este equipamiento para satisfacer una demanda que los otros servicios haban originado. Entre
ellos estuvieron el hotel San Jorge (1968), que se ubic en la calle 69 frente a la Terminal nica
de Autobuses de la Unin de Camioneros de Yucatn, para dar servicio inmediato a los viajeros
que llegaban a la ciudad; const de 50 cuartos distribuidos en tres plantas. (Fig. 90) El hotel San
Luis (1962), obra del ingeniero Jorge F. Carrillo H, ubicado en el barrio de Santiago, el cual se
construy en una esquina donde incluy el manejo del cristal y el tratamiento de horizontalidad
en su volumetra; ofreca 24 cuartos, piscina, agua potable fra y caliente y estacionamiento
gratuito para vehculos en el propio hotel, entre otros aspectos. (Fig. 91) El hotel Mxico (1963),
ubicado en la calle 60 entre 65 y 67; desarrollado en tres pisos, cuyos balcones de los cuartos
volaron por encima de la acera, invadiendo el espacio pblico. (Fig. 92) Y el hotel del Mayab
(1968), ubicado en la calle 50 entre 65 y 67; que cont con 22 cuartos, piscina, estacionamiento
y cafetera; el proyecto fue del arquitecto Federico I. Fritz Corona; este fue un edificio ms que
se insert en una de tantas esquinas. Fig. 93
Estas acciones se vinieron a sumar a la consolidacin del centro de la ciudad como el lugar principal de servicios y comercios. Como se aprecia en el plano 16, se consolid este servicio en el
centro, pero tambin se inici la expansin hacia otras zonas al norte de la ciudad, el Paseo de
Montejo y hacia la colonia Miguel Alemn, aunque tuvo otra escala.
280
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 25 de julio de 1968. El Ayuntamiento indebidamente le haba autorizado un alineamiento de cuatro metros, cuando lo estipulado eran cinco, an as los constructores y propietarios
no lo respetaron.
171
172
Plano16. Equipamiento
hotelero construido en la
dcada de los aos sesenta.
173
Lo anterior permite sintetizar que el desarrollo del equipamiento en la dcada de los aos
sesenta se dio de la siguiente manera: en el centro de la ciudad se continu con ms fuerza la
tendencia concentradora de equipamiento, en todos los rubros, salud, bancario y comercial
y otros prosiguieron con lo iniciado la dcada anterior, especialmente el hotelero, que logr
su consolidacin.
Hacia el norte de la ciudad se confirm la preferencia de expansin en todos los rubros, en mayor o menor grado; sobresali el comercial, con la instalacin de los supermercados que vinieron
a llenar vacos en grandes zonas habitacionales, sin embargo, de manera casi exclusiva para esa
rea de la ciudad.
El Estado por su parte confirm la vocacin de la zona de la avenida Itzaes y del poniente de
la zona para los servicios de salud, con inversiones de orden regional; el centro de la ciudad
se consolid como prestador de servicios; la zona de El Fnix se convirti en sede de equipamiento educativos y de salud; en la salida hacia la ciudad de Campeche se instalaron las
agencias de autos, oficinas para la administracin pblica e industrias refresqueras, entre otros;
en la avenida Paseo de Montejo se inici la expansin de servicios, entre los que destacaron los
bancarios, y en la salida hacia el puerto de Progreso, con el Instituto Tecnolgico y la creacin
de la paraestatal Cordemex, se conform un corredor con variados servicios. La concentracin
de todos estos equipamientos en el centro y en la zona norte de la ciudad fue contundente.
Ver plano 17
Se logr la modernizacin de la ciudad por la introduccin en toda ella del servicio de agua
potable y electrificacin; y en el plano urbano se logr la concrecin de reas habitacionales
realizadas con los equipamientos, servicios y vas de comunicacin con la ciudad necesarias,
acciones promovidas tanto por la iniciativa privada como por el Estado y proyectadas por arquitectos locales.
174
175
Los cdigos de la arquitectura moderna se incorporaron en todas las obras, con diferentes resultados, segn las cualidades de los proyectistas. Los agentes modernizadores, arquitectos o ingenieros, utilizaron los mismos cdigos arquitectnicos en las obras promovidas por el Gobierno
del Estado o por la iniciativa privada, a diferencia de aquellas en donde el Estado utiliz una
imagen institucional, tal fue el caso del IMSS y el ISSSTE.
Una gran cantidad de edificios histricos fueron demolidos o modificados para la nueva arquitectura; algunos de ellos dejaron una huella de su tiempo y, con diferencia de criterios, enriquecieron el espacio urbano; sin embargo, un nmero muy elevado slo contribuy a destruir el
tejido histrico. Estas alteraciones no slo fueron en lo formal sino que un gran nmero invadi
el espacio urbano con elementos de diferentes formas en volado.
176
CAPTULO 3
LOS AGENTES MODERNIZADORES
De acuerdo con la definicin de Carlota Sol, en el proceso de modernizacin, los encargados
de poner en prctica los adelantos cientficos o tecnolgicos son aquellos que denomin como
los agentes modernizadores o intelligentsia, el grupo poseedor de una formacin intelectual, ya
sea profesional, tcnica, cientfica o bien, expertos en general, que para logar sus fines deben de
contar con el apoyo de grupos sociales y polticos con el fin de impulsar y asegurar su puesta en
marcha en la sociedad, as como de otros medios para lograr su difusin y su aceptacin, en este
caso los mass media en la figura del peridico y el discurso en el emitido.
En este captulo se presenta el proceso de modernizacin de la arquitectura y su resultado,
producto de la intervencin de diversos factores de ndole cultural, ya fuera de tipo poltico,
econmico, cientfico o tcnico, que, conjugados, permitieron su desarrollo con diferentes grados de profundidad de acuerdo con las posibilidades del grupo que desarroll y promovi esta
arquitectura. Su identificacin y los modernismos que resultaron de este proceso fueron tambin
los objetivos de este apartado.
El captulo se estructura en tres partes en coincidencia con los grupos de agentes modernizadores identificados. En el primer grupo estuvieron los promotores, llmese el Estado, o los
empresarios o particulares pertenecientes a la iniciativa privada, que impulsaron a los grupos
de profesionistas y constructores para el logro de la arquitectura moderna. En el segundo
grupo se ubicaron los constructores: arquitectos, ingenieros o contratistas que desempearon
diferentes roles, ya fuera como actores involucrados directamente en la generacin y aplicacin de nuevos sistemas y materiales constructivos, o bien como proyectistas que plantearon
nuevos cdigos arquitectnicos. Y el tercer grupo lo conformaron aquellos que tuvieron que
ver con la difusin de ideas para la formacin de actitudes y mentalidades del hombre moderno, a travs de uno de los medios masivos de comunicacin: el peridico; por un lado,
en lo relativo a la concepcin de la arquitectura y urbanismo moderno, y por otro, en la
177
serie de servicios hospitalarios;1 en tanto que Fomento de Yucatn promovi la colonia Mxico
como un recurso para abatir la falta de vivienda para las clases media y obrera, colonia que
aos ms tarde se constituy como el emplazamiento de vivienda residencial ms exclusivo de
la ciudad.
Henequeneros de Yucatn
Henequeneros de Yucatn fue una asociacin que se cre mediante un decreto en febrero de
1938,2 durante el gobierno del ingeniero Humberto Canto Echeverra, con la finalidad de nivelar
las diferencias econmicas y tcnicas entre los ejidos. La asociacin estaba presidida por el gobernador del estado y representantes de las diversas agrupaciones de productores del henequn;
funcionaba mediante varios departamentos tcnicos: la Gerencia Ejecutiva y los departamentos
agrcola, de asistencia social y auditora. Entre las funciones que tena la Gerencia Ejecutiva estaban, adems de lo relativo a la extraccin, siembra y comercializacin del agave, las acciones
relacionadas con el mejoramiento de las condiciones de vida de los trabajadores.
Segn el informe presentado en 19503 y nico se inform que en los lugares en los que
haba excedente de trabajadores de la fibra, se les emple en la construccin de carreteras y
caminos ejidales, como una contribucin al empleo y, a la vez, al mejoramiento y dotacin de
carreteras costeadas por la institucin. Otra accin fue la construccin y reparacin de casas
para ejidatarios; como parte del programa social de asistencia y saneamiento de la vivienda se
construyeron las primeras mil casas de mampostera para ejidatarios, distribuidas por todo el
campo henequenero.4 Otra de las acciones fue la creacin de la Escuela de Capacitacin para
1
Estos hospitales se constituyeron en el antecedente de las clnicas del Seguro Social, en la dcada de los
aos setenta.
2
A travs del decreto Nm. 5 publicado el 5 de febrero de 1938, se autoriz al Ejecutivo Estatal para formar con los
productores de henequn en rama y penca a travs de la asociacin Henequeneros de Yucatn.
3
Informe del Consejo Directivo de Henequeneros de Yucatn, correspondiente al ejercicio de 1950, Editorial Zamn, Mrida Yucatn, 1951, p. 22 y 23.
4
Yucatn: Cuarenta aos de servicios de salud pblica 1940-1980, Ediciones del Gobierno de Yucatn 1976-1982,
Mrida, Mxico, 1980, p. 23.
179
Informe del ciudadano Ernesto Novelo Torres, gobernador constitucional de Yucatn ante la XXXVI Legislatura del
Estado, ao de 1944, Mrida, Mxico, p. 116, s/f.
6
Informe del Consejo Directivo de Henequeneros de Yucatn,, op. cit., p. 44.
7
Informe del ciudadano Ernesto Novelo Torres, gobernador constitucional de Yucatn ante la XXXVI Legislatura del
Estado, ao de 1944, Mrida, Mxico, p. 118.
180
31 de enero de 1946.8 Los otros sanatorios se ubicaron en Hunucm, Acanceh, Maxcan, Molas
Tixkokob, Motul, Cansahcab e Izamal. El programa se inici al interior del estado en 1951 con la
edificacin de los sanatorios de Hunucm y Acanceh.9 En el informe que rindi el Consejo Directivo de Henequeneros de Yucatn en 1951, expuso ampliamente la distribucin y el servicio
que se haba proporcionado hasta esa fecha. Fig. 2
Los proyectos de los hospitales para los municipios del interior del estado los elabor el ingeniero Edmundo Avils Cuevas y la diferencia en los esquemas fue bsicamente por el nmero de
camas, aspecto que obedeci al tamao de la poblacin a la que se dara servicio.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 1 de febrero de 1946. En la resea de la crnica de la inauguracin se inform
del texto de la placa que se devel: Este hospital fue construido a iniciativa del Sr. Ernesto Novelo Torres, presidente
del Consejo de Administracin de Henequeneros de Yucatn y fue inaugurado por el mismo funcionario el 31 de enero
de 1946; hay que sealar que en el Informe de Gobierno del C. Jos Gonzlez Beytia, de 1946, ste seal que: Vencidas no pocas dificultades, pudieron inaugurarse, el 20 de noviembre prximo pasado, los servicios del Hospital
lo que no coincide con los datos del peridico de febrero de 1946 en donde se hizo la crnica de la inauguracin
acontecida el 31 de enero de 1946.
9
Informe del Consejo Directivo de Henequeneros de Yucatn, p.44.
181
El esquema que propuso fue el de una H: en la espina central y una de sus alas ubic el acceso,
sala de espera y los servicios, as como las circulaciones para llegar al rea de camas, ubicadas
en los extremos de la otra ala; la orientacin de las alas estaba en el sentido norte-sur, para recibir
la ventilacin ms adecuada y negar la insolacin de mayor incidencia. Fig. 3 y 4
10
Informe del ciudadano Ernesto Novelo Torres, gobernador constitucional de Yucatn, ante la XXXVI Legislatura
del Estado, ao de 1945, Mrida, Mxico, p. 52. Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 1 de febrero de 1946.
183
Indudablemente estas obras fueron muy importantes, por su tamao, diversidad de servicios y
calidad en las instalaciones; aspectos con los que no contaban las otras instalaciones mdicas
que se construyeron en la misma dcada.11
Fomento de Yucatn
En el ao de 1942, siendo gobernador del estado el Sr. Ernesto Novelo Torres (1942-1946), se
cre un organismo denominado Fomento de Yucatn,12 como institucin de beneficencia, de utilidad pblica y como un organismo ejecutor. Como consta en el decreto correspondiente, se fij
un capital de veinte millones de pesos, que se integr mediante un impuesto de siete centavos
por kilogramo bruto a la produccin de henequn, recaudado por Henequeneros de Yucatn.
La duracin de la institucin se plane para veinte aos y sus finalidades eran las siguientes:
a) Crear granjas y colonias para fines agrcolas y cra de animales domsticos y granjas de experimentacin. b) Fomentar la agricultura y la industria en la forma ms conveniente para su desarrollo. c) Refac11
12
184
cionar a colonos, agricultores e industriales. d) Crear departamentos especiales para el estudio de los
mercados nacionales y extranjeros, en relacin con las actividades de la institucin. e) Establecer lneas
de navegacin y construir o promover la construccin de caminos y carreteras. f) Crear las instituciones,
corporaciones, departamentos u organismos que se estimen necesarios para los fines de la institucin.
g) Crear fondos sociales para seguros contra incidentes de trabajo y contra la vejez; fondos de ayuda
para casos de: prdida de cosechas, constitucin de centros mdicos, centros de enseanza agrcola y
todos cuantos sean necesarios para los fines de beneficencia y utilidad pblicas a que est destinada.
h) Colaborar con el gobierno del estado en lo relativo a asistencia pblica, mejoras materiales, abastecimientos de aguas, drenaje y dems actividades de conveniencia general. i) Procurar la elevacin
del nivel de vida de las clases trabajadoras y el mejoramiento de su alimentacin. j) Crear laboratorios,
departamentos y comisiones encargados de estudiar y combatir las epidemias, enfermedades y plagas.
k) Adquirir todos los bienes, celebrar todos los contratos y, en general, ejecutar todos los actos que sean
necesarios para llenar los fines de su instituto.13
La direccin de la institucin estuvo a cargo de un Consejo Directivo integrado por el gobernador del estado o un representante que l nombrara, as como representantes de: Henequeneros
de Yucatn, Unin de Productores Henequeneros, Ejidatarios Henequeneros, Cmara Nacional
de Comercio de Mrida y un representante de los bancos establecidos en Yucatn. En el Informe
de Gobierno del ao de 1942, el gobernador Novelo Torres precis:
Estimo importante consignar, que Fomento de Yucatn es y ser una institucin totalmente desvinculada
de la poltica, y que tuve el ms escrupuloso empeo en que sus dirigentes fuesen hombres de empresa, capacitados por sus conocimientos y experiencia en la materia y, sobre todo, honorables; pues sin
estas condiciones la institucin no podra gozar de la confianza pblica que le es indispensable para
satisfacer sus fines.14
Si bien es cierto que en los primeros aos de funcionamiento, cuando la industria del henequn
tuvo un perodo de gran auge econmico, se impulsaron varios proyectos de desarrollo y bienestar de la poblacin, una vez pasado el auge dicha institucin comenz a tener problemas
econmicos y para el ao de 1950 estaba ya en la bancarrota, desapareciendo totalmente en
1960, ao del ltimo informe de gobierno en el cual se hizo mencin.
13
Informe del ciudadano Ernesto Novelo Torres, gobernador constitucional de Yucatn, a la XXXV Legislatura del
Estado, ao de 1942, Mrida, Mxico, pp. 67, 68.
14
Ibid., p. 67.
185
Dentro de los proyectos que emprendi como consecuencia de la intencin de elevar el nivel
de vida de los trabajadores y con la facultad de adquirir bienes para cumplir con los fines del
instituto, Fomento de Yucatn decidi comprar una gran extensin de tierra en el norte de la ciudad para crear una colonia para la clase media y obrera, y as abatir la falta de vivienda que se
planteaba en ese momento; es importante sealar que en las dcadas de los aos cuarenta y cincuenta el nmero de habitantes en la ciudad se increment, de 98,852 a 142,858 habitantes.
Informe del seor Ernesto Novelo Torres, gobernador constitucional de Yucatn, ante la XXXVI Legislatura del
Estado, ao de 1944, Mrida, Mxico, p.103.
16
Informe del ciudadano Ernesto Novelo Torres, gobernador constitucional de Yucatn, ante la XXXVI Legislatura
del Estado, ao de 1945, Mrida, Mxico, p. 67.
17
En abril de 1944 se expidi un decreto en donde se autorizaba al Ejecutivo para vender lotes.
186
urbano, por el trmino de diez aos, a los predios que se construyeran en la colonia Mxico,
siempre y cuando los propietarios se ajustaran a determinadas condiciones que se expresaban
en el proyecto correspondiente.
Para el ao de 1948, durante el gobierno del profesor Jos Gonzlez Beytia, se inform del estado de las ventas de los terrenos, as como las facilidades de compra que se proporcionaban:
un veinte por ciento del importe al concertarse la operacin y el saldo distribuido en cincuenta
mensualidades. As mismo, se insisti en poner de manifiesto que la intensificacin de las construcciones resolva en parte el problema de la escasez de viviendas;18 en 1950, adems de reiterar
en el aporte que se haca a la resolucin del problema de habitacin, se consign en el informe
correspondiente, que se haban iniciado los trabajos de instalacin elctrica para la colonia, y
que ese hecho constituir un poderoso elemento de progreso para la naciente colonia.19
La colonia Mxico se proyect con todos los elementos de equipamiento necesarios para el
desarrollo autnomo de una zona habitacional; segn el plano publicado en la prensa en
donde apareci la lotificacin y ubicacin del equipamiento, sta constara con: biblioteca
pblica, escuela primaria, Escuela de Artes y Oficios, talleres, pequeas industrias, cine-teatro
y comercios, reloj y asta bandera, mercado y casino obrero. Su traza fue la tradicional y las
manzanas de proporciones, dimensiones y orientacin similares a las de la colonia Garca Giners; incluso en la ubicacin de sus reas pblicas, como el parque localizado al centro del
trazo de la colonia.
En el ao de 1946, la colonia ya contaba con obras de urbanizacin, y ya se estaban construyendo algunas viviendas entre grandes y pequeas,20 sin embargo, fue hasta el ao de 1948
cuando se dio a conocer por la prensa el plano a detalle de dicha colonia, y se anunci la terminacin de la instalacin de la corriente elctrica de 110 volts, que proporcionara este servicio
18
Informe del profesor Jos Gonzlez Beytia, gobernador constitucional del estado de Yucatn, ao de 1948, Mrida, Mxico, p. 97.
19
Informe del ciudadano profesor Jos Gonzlez Beytia, gobernador constitucional del estado de Yucatn, ao de
1950, Mrida, Mxico, p. 80.
20
Leopoldo Tommasi Lpez, La ciudad de ayer, de hoy y de maana, Zamn, Mrida, Mxico, 1951, p. 260.
187
Sin embargo, con el pasar de los aos se pudo observar, por la publicidad de los lotes y casas
que se ofrecan, un cambio en la idea del tipo de colonia con la cual se pretenda abatir el problema de vivienda para las clases obreras. En 1949, en la publicidad de la Compaa Impulsora
Urbana 21 se mostraron algunas de las casas de concreto prefabricado que la compaa intentaba introducir en el mercado desde el ao de 1945: una vivienda de tipo medio, con formas
tradicionales. Fig. 12.
21
188
Fig. 12 Anuncio de la
Compaa Impulsora
Urbana de Yucatn, S.A.
en donde se aprecia una de
las casas que se construyeron en la colonia Mxico.
Imagen tomada del Diario
de Yucatn, el 18 de junio
de 1949, p. 9.
En 1953, la misma institucin, Fomento de Yucatn, a travs de su oficina de ventas, ofreca lotes grandes para residencia seorial, colegio o club, como una nica oportunidad para inversionistas. Este proceder continu y claramente se pudo observar que se dio una especulacin del
suelo; el mismo Tommasi Lpez, en su libro ya citado, habl de ella como una de las mejores
colonias residenciales de la ciudad que, sin embargo, no se dot del equipamiento prometido
y necesario.
En relacin con el equipamiento, la colonia slo cont con el parque y la Escuela de Artes y Oficios (1948), obra del arquitecto Leopoldo Tommasi Lpez; que se instal en un edificio adaptado;22
dicha escuela se destin a preparar tcnicos agrcolas e industriales. El parque se construy en la
dcada de los aos sesenta, en el lugar donde se haba planeado la biblioteca pblica, por lo que
la colonia slo cont con estos dos elementos del equipamiento prometido. Fig. 13
22
Informe del ciudadano profesor Jos Gonzlez Beytia, gobernador constitucional del estado de Yucatn, ao de
1944, Mrida, Mxico, p. 103.
189
Fig. 13 Perspectiva
de la Escuela de Artes
y Oficios del arquitecto
Leopoldo Tommasi Lpez.
Imagen tomada de la Revista Alma Yucateca, febrero
de 1945, pg. 25.
Fig. 14 Casa del Sr. Felipe
H. Escalante Marn en la
colonia Mxico, construida
de concreto prefabricado
por la Impulsora Urbana de
Yucatn. Imagen tomada
del Diario de Yucatn el 18
de junio de 1949.
Fig. 15 Venta de edificio
en la colonia Mxico
por Fomento de Yucatn.
Imagen tomada del Diario
de Yucatn el 18 de junio
de 1949.
Fig. 16 Venta de residencias
en la aristocrtica colonia
Mxico. Imagen tomada del
Diario de Yucatn, 29 de
abril de 1962.
En 1954 se construy en la vecina colonia de Itzimn la escuela primaria privada de los hermanos maristas para personas de poder adquisitivo quienes se cambiaron de un local ubicado
en el centro de la ciudad a ese sitio, lo cual llen un faltante (aunque de manera parcial) del
equipamiento educativo para un sector de la poblacin. Este hecho fue significativo ya que para
mediados de los aos cincuenta se inici la construccin de viviendas residenciales para gente
de alto poder adquisitivo en la colonia Mxico (Fig. 14-16); los arquitectos que las realizaron
introdujeron una nueva concepcin espacial urbana, as como nuevos cdigos expresivos, funcionales, espaciales y tcnicos, propios de la arquitectura moderna. A lo largo de muchos aos
en el discurso oficial reiteradamente se justific el proyecto de urbanizacin, con el argumento
de contribuir a la solucin de la falta de vivienda para la clase media y obrera, sin embargo esto
no sucedi.
190
23
Informe ledo ante la XXXVII Legislatura de Yucatn por el Profr. Jos Gonzlez Beytia, gobernador constitucional
del estado de Yucatn, el 1 de enero de 1947, correspondiente al perodo del 1 de febrero al 31 de diciembre de 1946,
Mrida, Mxico, 1947, p. 7.
24
En el gobierno federal estaba como presidente de Mxico el licenciado Miguel Alemn Valdez, en la gubernatura
del estado el profesor Jos Gonzlez Beytia y al frente del ayuntamiento de Mrida el licenciado Vicente Erosa Cmara.
25
Informe del profesor Jos Gonzlez Beytia, gobernador constitucional del estado de Yucatn, ao de 1948, Mrida, Mxico, p. 17.
191
propuestos por la misma compaa que vino de la ciudad de Mxico a construir la obra.26 En lo
que respecta a lo arquitectnico, las viviendas presentaban una racionalizacin en sus espacios;
en lo formal el diseo de sus elementos acusaba una proporcin horizontal y su fisonoma careca de ornamentacin; evidentemente haba una racionalizacin en todos los aspectos.
El diseo del conjunto y de la planta tipo respondan a los principios del funcionalismo moderno;
la masificacin y racionalizacin de la vivienda respondan a los principios tericos y tcnicos
de la gnesis del movimiento moderno en la arquitectura.
Sin embargo, todos estos aspectos innovadores que el estado introdujo a travs de un modelo de
vivienda que no corresponda ni a la sociedad yucateca ni al sitio, trajeron como consecuencia
que no se aceptaran en muchos aos, de tal modo que el agente modernizador Estado, a travs
de los profesionistas, es decir, la Compaa Latinoamericana que hizo un negocio (con seguridad exitoso) no lograron incidir en el proceso de modernizacin en relacin con el modo de
habitar en el espacio urbano y en la vivienda. Despus de algunos aos de concluida la colonia,
se ofrecan casas a precios muy accesibles, convirtindose en prcticamente el nico motivo
por el cual estas viviendas y la zona se habitaron, a pesar de contar con servicios de infraestructura y equipamiento importantes, entre ellos el alcantarillado, el mdulo de oficinas y la planta
de rebombeo de agua potable, construida por la misma compaa que hizo las viviendas, el
Hospital Beatriz Velasco de Alemn (1952) y la Escuela Juan Crisstomo Cano y Cano (1957).
Fue en la dcada de los aos sesenta cuando se construyeron la iglesia, el parque, el mercado
y otras escuelas.27
Las acciones mencionadas con anterioridad llevan a concluir que en la dcada de los aos cuarenta la figura del Estado protector fue determinante en el proceso de modernizacin, un Estado
que prob varias frmulas diferentes para su consecucin, teniendo xito de manera parcial, ya
que si bien es cierto se logr una modernizacin hospitalaria va la Asociacin de Henequeneros
26
Elvia Mara Gonzlez Canto, entrevista realizada al ingeniero Ramn Lpez Peraza, residente de obra de la colonia Miguel Alemn, el da 7 de junio de 1998.
27
Para ampliar el tema, consultar: Mara Elena Torres Prez, Rescate de experiencias urbanas, transformacin y
adecuacin de la colonia Miguel Alemn, en Cuadernos de Arquitectura, Nm. 18, FAUADY, 2005, pp. 44-69.
192
28
Tercer Informe del C. Luis Torres Mesas, gobernador constitucional de Yucatn, ante la XLIV Legislatura del Estado, comprendido del 1 de febrero de 1966 a 31 de enero de 1967, Mrida, Mxico, 1967, pp. 73-76.
193
En el ao de 1968 se hizo la entrega de las primeras 418 casas de la Unidad Habitacional denominada colonia Revolucin, construida por Cordemex y ubicada al costado oriente del Centro
Industrializador. Al conjunto se le dot de una tienda Conasupo, una zona comercial con 28 departamentos de 996 m2; una sala de exhibiciones y artesanas con 228 m2 de superficie, 7,191 m2
de jardines, el Centro Escolar Zamn en una superficie de 50,000 m2, que const con 30 aulas en
10 edificios para educacin primaria, salas de msica, talleres, biblioteca, refresquera y dems
servicios. Tambin se le dot de un jardn de nios. En diciembre del mismo ao se dio inicio a
la segunda etapa del complejo habitacional que inclua 437 unidades.29
Al concluir el ao de 1969, la unidad ya contaba con una agencia bancaria, un club obrero social, teatro-cine, un templo religioso y oficinas de correos y telgrafos. En el mismo ao se inici
la tercera etapa, con 314 casas para obreros en una superficie de 22, 000 m2 y 155 casas par
empleados administrativos en 16,000 metros cuadrados.30 Fig. 17
29
Quinto Informe del C. Luis Torres Mesas, gobernador constitucional de Yucatn, ante la XLIV Legislatura del
Estado, comprendido del 1 de febrero de 1968 a 31 de enero de 1969, Mrida, Mxico, 1969, pp. 80-82.
30
Sexto Informe del C. Luis Torres Mesas, gobernador constitucional de Yucatn, ante la XLIV Legislatura del Estado, comprendido del 1 de febrero de 1969 a 15 de enero de 1970, Mrida, Mxico, 1970, pp. 91, 92.
194
Sin duda, esta accin desarrollada por el Estado correspondi a los intereses econmicos del
Estado respecto de una industria que estaba haciendo todo lo posible por sobrevivir, lo que
motiv la creacin de un conjunto habitacional con todos los equipamientos necesarios para
su funcionamiento.
Hay que sealar que cuando el Estado emprendi obras urbanas de modernizacin con el propsito de abatir el problema de vivienda, no se lograron los objetivos planteados; los conjuntos
habitacionales no se desarrollaron para las clases sociales para los que se destinaron; no se les
dot del equipamiento necesario y cuando se hizo, fue en beneficio de otro grupo social diferente al que se le destin originalmente, fue cuando la accin urbanizadora tena como objetivo
primordial coadyuvar para el mejoramiento de la productividad de la actividad econmica de
importancia estatal, el objetivo s se cumpli.
195
31
Arcadio Sabido Mndez, Los hombres del poder, monopolios, oligarqua y riqueza en Yucatn: 1880-1990, Universidad Autnoma de Yucatn, Mrida, Mxico, 1995, pp. 171, 184, 185.
196
Arcadio Sabido Mndez, Los hombres del poder, p. 197. El autor realiza esta clasificacin en funcin de la
conformacin de los grupos hegemnicos hasta la dcada de los aos noventa. En el perodo de estudio fue cuando
se dio la recomposicin de los capitales, que se reflejaron ms adelante.
197
33
En sociedad con el ingeniero Ulises Gonzlez Torre, cuyos motivos de tal asociacin fueron de ndole profesional.
198
40 s
50 s
60 s
Arquitectos
43%
26%
18
37%
Ingenieros
57%
22
74%
30
63%
Total
16
30
48
Armada por la autora, con la informacin obtenida del registro de las obras.
Un anlisis ms detallado, seal que en la dcada de los aos cuarenta, a pesar de aparecer en
el registro 43% de arquitectos, la participacin de la mayora fue muy limitada, en varios casos
tan slo con una obra; entre ellos estuvieron: Aigmar Embury, Manuel Ambilis, Carlos Castillo
34
No se consideraron las obras del gnero de vivienda; varios de los arquitectos protagonistas de estas obras desarrollaron un trabajo muy importante en la construccin de viviendas; entre ellos estuvieron los arquitectos Carlos
Castillo Montes de Oca, autor de numerosas viviendas neocoloniales; Flix Mier y Tern, Fernando Garca Ponce, Fernando Roche Martnez, Miguel Nagel Cervera Mangas, Fernando Lpez Escalante, entre otros, quienes construyeron
viviendas modernas en las colonias del norte de la ciudad en las dcadas de los cincuenta y sesenta, y algunos de ellos
continuaron su produccin varios aos ms.
199
Montes de Oca, Flix Mier y Tern, Leopoldo Tommasi Lpez, Miguel ngel Cervera Mangas y
Gaetano Maglione.
Los principales constructores fueron los arquitectos Carlos Castillo Montes de Oca y Manuel
Ambilis; de entre las obras que realizaron destacaron el Hospital para Ejidatarios Henequeneros
y el Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto; la primera para una asociacin privada, Henequeneros de Yucatn, y la segunda para el servicio del Estado; el primero con tendencia neocolonial
propia de la arquitectura que el arquitecto Castillo haba desarrollado en otras obras en la dcada
pasada y en mltiples viviendas. En el Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto el arquitecto
Ambilis incorpor cdigos funcionalistas, la distribucin del esquema y el acomodo de los salones fueron hechos inequvocos de esta tendencia, como consecuencia de ello, la expresividad
al incorporar largos corredores de columnas y losas, as como la inclusin de elementos formales que acusaban an ms su horizontalidad. Ambos arquitectos realizaron su ltima obra en la
dcada de los cincuenta, en coautora: el Centro Mdico del Sureste, obra ubicada en el barrio
de Santiago, en donde intentaron incorporarse a la modernidad arquitectnica, el resultado fue
ms bien un protorracionalismo.
La dcada de los cincuenta fue la de los ingenieros; en esta dcada la Facultad de Ingeniera
Civil de la Universidad Autnoma de Yucatn estaba ya consolidada, por lo que regularmente
egresaban un mayor nmero de ingenieros;35 el mayor nmero de obras fueron realizadas por
ellos; en el medio no haba arquitectos, decan los ingenieros;36 entre ellos estuvieron los
ingenieros Mario Cmara Rosas, Francisco Rubio Ibarra, Ramiro Bojrquez Molina, Renn Domnguez Lara, Renn Montes de Oca, Hernn Prez Vega, Ulises Gonzlez Torre, lvaro Ponce
Pen, Alberto Duarte Carrillo, Mario Duarte Carrillo, Franz R. Fortuny, Ermilo Gemes Lara, Ral
Fernndez Cepeda, Ramn Lpez Peraza, Rubn Encalada Alonzo, Francisco Zubieta, Edmundo
35
200
Avils Cuevas, Eloy Cceres Cceres, Jorge Medina Patrn, Francisco Vega y Loyo, Vctor Alcocer
Rosado, Mario Trava Imn y Ral Sobrino Campos. Los arquitectos que tambin realizaron alguna obra en la dcada fueron: Jorge Alducn Sisniega, Alberto Garca Bolio, Carlos Leduc, Enrique
Manero Pen, Flix Mier y Tern Lejeune, Manuel Ambilis, Carlos Castillo Montes de Oca y
Miguel ngel Cervera Mangas.
El mayor nmero de obras las realizaron los ingenieros lvaro Ponce Pen en sociedad con
Ulises Gonzlez Torre; Mario Duarte Carrillo, Ramn Lpez Peraza y el arquitecto Flix Mier y
Tern Lejeune, en sociedad con el ingeniero Franz R. Fortuny. Los arquitectos Ulises Gonzlez,
Duarte Carrillo, Ramn Lpez Peraza y Franz Fortuny estaban recin egresados de la Facultad
de Ingeniera Civil de la Universidad de Yucatn. El ingeniero lvaro Ponce Pen recientemente
haba llegado de realizar sus estudios de Ingeniera Civil en la Universidad de Dayton Ohio, Estados Unidos, y el arquitecto Flix Mier y Tern haba retornado de Colombia despus de trabajar
un tiempo en esa ciudad, despus de haber realizado sus estudios en el Rensselaer Polytechnic
Institute, en Troy Nueva York, Estados Unidos.
De las obras ejecutadas por los ingenieros lvaro Ponce Pen y Ulises Gonzlez Torre sobresalieron: el Colegio Montejo, el parque Julio Molina37 y la planta de la embotelladora Coca Cola
(con excepcin del colegio Montejo),38 en donde sintetizaron algunos conceptos de los planteamientos de las obras escolares del CAPFCE realizados en otras lugares de la Repblica con
planteamientos funcionalistas, ambientales y expresivos adecuados al sitio; las otras obras fueron
de ingeniera y su importancia fue por su tamao y significado econmico; situacin que cambi en la dcada siguiente al asociarse con el arquitecto Fernando Garca Ponce. Lo mismo se
puede decir de las obras de los ingenieros Mario Duarte Carrillo y Ramn Lpez Peraza, quienes
disearon y construyeron varias obras importantes por su tamao, no as por los planteamientos
arquitectnicos o tcnicos.
37
Ms conocido como el parque Carta Clara, ya que era propiedad de la Cervecera Yucateca.
Vid, infra, cap. 4, subcap. 4.2.
38
201
El agente modernizador en esta dcada lo constituy el arquitecto Flix Mier y Tern Lejeune,
asociado con el ingeniero Franz R. Fortuny Cepeda, con los edificios: Aladino, el Banco de
Campeche sucursal Mrida y la Autorrefaccionaria Torre, entre los ms importantes. En todos
ellos incorpor un lenguaje nuevo, totalmente alejado de los historicismos y nacionalismos, con
planteamientos formales, tcnicos, funcionales y expresivos propios de la arquitectura moderna;
se distingui por el juego de volmenes, planos y lneas, ricos en texturas, as como soluciones
estructurales atrevidas y complejas.
Otros agentes modernizadores que incidieron en esta dcada con la presencia de tan slo una
obra, pero que sin duda anunciaron el advenimiento de un gran nmero de constructores ingenieros y arquitectos que en la dcada siguiente iran todos en el mismo sentido, hacia la arquitectura moderna, fueron: el arquitecto Enrique Manera Pen, egresado de la UNAM, con la iglesia
de la Sagrada Familia (1957), en donde incorpor en lo formal y expresivo la modernidad y el
ingeniero Rubn Encalada Alonzo, egresado de la Universidad de Yucatn, quien construy el
mercado de Santa Ana (1959), e incorpor el novedoso sistema estructural de paraguas invertidos, aprovechando las cualidades del concreto armado.
La dcada de los sesenta se caracteriz por la incorporacin a la dinmica de diseo y construccin de obras de un mayor nmero de profesionistas, tanto ingenieros como arquitectos,
sin embargo, la mayora la constituyeron todava los ingenieros. Es preciso apuntar que en el
medio no exista la carrera de arquitectura, en cambio la Facultad de Ingeniera Civil estaba
totalmente consolidada; no obstante un gran nmero obras fueron realizadas por un grupo reducido de profesionistas.
Entre los arquitectos estuvieron: Flix Mier y Tern Lejeune, Leopoldo Tommasi Lpez, Miguel
ngel Cervera Mangas, Fernando Lpez Escalante, Fernando Garca Ponce, Enrique Rincn Edgertn, Erick Daz Palma, Juan Jos Daz Infante, Juan Kluchnick, Ren Martnez Ostos, Jorge
Fernndez Guevara, Juan Jos Terrats Mongiote, Manuel Cirerol Galn, Federico Fritz Corona,
Jos Molina S., Eduardo Graue Bacmeister, Jorge R. vila Palma y Gustavo Frausto.
202
Y los ingenieros fueron: Ramiro Bojrquez Molina, Ulises Gonzlez Torre, lvaro Ponce Pen,
Mario Duarte Carrillo, Franz R. Fortuny Cepeda, Ramn Lpez Peraza, Rubn Encalada Alonzo,
Hernn Prez Vega, Flavio Crdenas, Edmundo Avils Cuevas, Ramn Peraza, Manuel Rodrguez
Pen, Eloy Cceres Cceres, Luis Fernndez Lpez, Gustavo Struck, Gustavo Gamboa, Antonio
Uribe Gonzlez, Hugo M. Espsitos F., Carlos Cuevas May, Santiago Martnez Ros, Eduardo Fajardo Ro, Jorge F. Carrillo H., Fernando Roche Martnez, Joaqun Ibarra Ruz, Luis F. Lpez Ambilis, Agustn Pen de Regil, Roberto Peniche Aguilar, Augusto Flores Hijuelos, Fernando Novelo
Castro y Fausto Bello Montalvo.
A pesar del gran nmero de constructores, las obras ms importantes y numerosas estuvieron en
manos de unos cuantos, no slo por la cantidad sino tambin por la incorporacin de los cdigos arquitectnicos modernos, la calidad y la integracin de nuevos sistemas constructivos con
elementos prefabricados industrializados. Este grupo lo conformaron: el arquitecto Flix Mier y
Tern, asociado con el ingeniero Franz R. Fortuny Cepeda; el arquitecto Fernando Garca Ponce,
asociado con los ingenieros lvaro Ponce Pen y Ulises Gonzlez Torre; el arquitecto Fernando
Lpez Escalante, asociado con el ingeniero Agustn Pen de Regil, y el ingeniero Mario Duarte
Carrillo, quien trabaj muchas veces solo o en asociacin con otros profesionistas.
A la sociedad entre los ingenieros lvaro Ponce Pen y Ulises Gonzlez Torre de la dcada
pasada se uni un nuevo integrante, el arquitecto Fernando Garca Ponce,39 quien realiz sus
estudios en la UNAM y combin su profesin con la pintura; de esta unin resultaron obras que
incorporaron todos los cdigos de la arquitectura moderna, entre ellas estuvieron la Terminal de
Autobuses de la Unin de Camioneros de Yucatn, el Centro Deportivo Libans, la Clnica de
Mrida, la Embotelladora Peninsular, la Sede de la Delegacin de Trnsito Federal, el edificio de
la Polica de Caminos y Turismo, entre muchas otras.
El arquitecto Flix Mier y Tern, quien (con excepcin de sus primeras dos obras de la dcada
de los cuarenta) trabaj siempre en sociedad con el ingeniero Franz R. Fortuny Cepeda, realiz
39
Varios de los autores mencionados no concluyeron sus estudios; entre ellos Fernando Garca Ponce, Miguel
ngel Cervera Mangas, Ulises Gonzlez Torre y otros ingenieros de la Facultad de Ingeniera Civil. Esta condicin en
ningn momento reflej falta de capacidad para la realizacin de sus trabajos.
203
varios edificios, pero sin duda aquel en el que logr un resultado con una fuerza expresiva
propia de los modernismos del movimiento moderno fue en el edificio de Planeacin del
Gobierno de Estado, en donde incorpor las ideas del maestro Le Corbusier empleadas en los
edificios multifamiliares.
De las obras del arquitecto Fernando Lpez Escalante en sociedad con el ingeniero Agustn Pen
de Regil, egresados del Instituto Tecnolgico de Monterrey, entre las ms importantes estuvieron
el hotel Mara del Carmen, el Banco Hipotecario de Mrida, la distribuidora DINA-Renault de
Mxico, la Preparatoria de la Universidad de Yucatn y otras; quiz aquella en la que reflej los
modernismos no slo en lo formal y expresivo sino en la utilizacin de la tcnica y la espacialidad propia de la arquitectura moderna, con un alta sensibilidad hacia el sitio, fue la capilla de
la Casa de la Cristiandad.
La importancia del ingeniero Mario Duarte Carrillo estuvo ms all de las obras que emprendi
al convertirse en un agente modernizador que desarroll uno de los aspectos fundamentales
de la gnesis del movimiento moderno, la industrializacin de los procesos constructivos, su
incursin en la fabricacin de elementos presforzados y pretenzados; el sistema de vigueta y
bovedilla, travelosas, losas doble T, losa canal y la fbrica de concreto premezclado, cambiaron
el modo de construir y las caractersticas espaciales. Entre sus obras destac el estacionamiento
subterrneo y el edificio del Catastro en el cual utiliz por primera vez el sistema de techos de
vigueta y bovedilla, as como la iglesia de San Judas Tadeo en donde su expresividad fue resultado del empleo de la losa canal, entre otros.
Entre los profesionistas que tuvieron un desarrollo ms largo profesional, que se iniciaron desde
la dcada de los cuarenta y a principios de los aos setenta continuaban trabajando, estuvieron
los arquitectos Flix Mier y Tern Lejeune y Leopoldo Tommasi Lpez. Los dos jugaron diferentes roles: Flix Mier y Tern inici su trabajo profesional en Yucatn, trabajando con el arquitecto
Carlos Castillo Montes de Oca en la construccin de un templo para la isla de Cozumel y lo hizo
en el estilo que caracteriz el trabajo del arquitecto Castillo, neocolonial; aos ms tarde, Flix
Mier y Tern desarroll todos los cdigos de la arquitectura moderna en sus obras, mostrando
204
La Voz de la Revolucin, Mrida, Mxico, 1 de agosto de 1918, citado por Marco A. Daz Gmez, en Tesis de
Maestra, Reivindicacin y asimilacin en la arquitectura art dco de Yucatn, FAUADY, 2007, p.185.
205
representaba el usar el mencionado material y con esto bajar el costo de produccin de la vivienda y tener la posibilidad de poner al alcance de todo el pblico una casa barata.41 Un ao ms
tarde, anunci un medio fcil y cmodo de adquirir una vivienda, un sistema de mutualista, que
repetira en varias ocasiones, y declar: Convencidos de la ingente necesidad de construir casas
baratas, hemos establecido una gran fbrica de bloques huecos y de toda clase de elementos
que se usan en las construcciones de manera que podamos hacer una casa de cemento armado
en fbrica y montarla en cualquier parte del estado a precio de competencia. Nuestra patente
y nuestros elementos nos permiten construir la CASA BARATA42 A pesar de la declaracin
anteriormente mencionada, no hay referencias de cules fueron esos elementos que le hubiese
permitido al ingeniero Rolland armar una casa en fbrica y colocarla en cualquier lugar; los dibujos de las casas43 que aparecen en la prensa solamente muestran las paredes de block aparente
y algunos elementos como columnas y balaustradas de cemento prefabricadas.
Ya en la dcada de los cuarenta aparecieron varias casas comerciales que anunciaban prefabricados de cemento, como celosas, bloques rectos y curvos,44 tal fue el caso en 1947 de
R. Bolio G.S. de R.L.45 En 1949 otra fbrica de materiales llamada Piedra y Sahcab, S. de R.
anunciaba block de concreto con cmara de aire, en varios tamaos,46 rectos y curvos, adems
de proporcionar datos tcnicos en cuanto su resistencia y conductibilidad trmica, entre otras
cosas. Sin embargo, segn declaraciones del Sr. Delio Casares Cano47 y del ingeniero Mario
41
La Voz de la Revolucin, Mrida, Mxico, 1 de agosto de 1919, citado por Marco A. Daz Gmez, en Tesis de
op. cit., p. 62.
42
La Revista de Yucatn, Mrida, Mxico, 20 de enero de 1919, citada por Marco A. Daz Gmez, en Tesis
de, p. 63.
43
La Voz de la Revolucin, Mrida, Mxico, 20 de enero de 1919, citado por Marco A. Daz Gmez, en Tesis
de, pp.188-192.
44
Los bloques curvos se utilizaban para hacer tinacos.
45
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 17 de enero de 1946.
46
Op. cit., 24 de septiembre de 1949. Se anunciaban bloques de concreto con cmara de aire en dos tamaos: de 20
x 20 x 40, y 10 x 20 x 40, y de cada uno se daban sus especificaciones. Para el de 20 x 20 x 40 cm, deca: Peso: 18.500
kg, resistencia a compresin: 15.4 ton (35% mayor que en mampostera de cal y canto). Nmero de blocks por metro
cuadrado: 12.5 blocks. Coeficiente de conductibilidad trmica: 16. En 1953 esta empresa incorpor otras medidas: 6 y
x 12 y x 25 y en los curvos 7 x 20 x 40, segn el anuncio del 8 de febrero de 1953 del Diario de Yucatn.
47
Presidente del Consejo de Administracin de Casas de Concreto Prefabricadas, y primera fbrica de blocks
instalada en la Cd. de Mrida alrededor del ao de 1945.
206
Duarte Carrillo,48 esos bloques no tenan la resistencia adecuada, se rompan muy fcilmente
y muchos de ellos slo servan para paredes divisorias.
Otros profesionistas que tambin se dedicaron a elaborar bloques prensados antes de la dcada
de los cuarenta, fueron los seores Delio E. Alonso y el arquitecto Carlos M. Castillo Montes de
Oca, quienes tuvieron una pequea fbrica en donde construan bloques prensados; vigas y losas
de concreto, llamadas dalas con nervaduras, y posteriormente columnas; sin embargo, la produccin era escasa, de tan slo 70 bloques al da, que adems requera de mucha mano de obra, por
lo que despus de documentarse decidieron incursionar en la produccin del block vibrado que
se estaba construyendo en Estados Unidos y que era un material que presentaba mayor resistencia
utilizando menos cemento. As le plantearon la idea al Sr. Alfonso Capetillo Cirerol y lo invitaron
como socio capitalista, quien aport el dinero necesario para adquirir la maquinaria especial de
construccin de los bloques; sta se trajo de Estados Unidos de Norteamrica49 y tena capacidad
para una produccin de hasta tres mil bloques en una jornada de ocho horas; as como la posibilidad de construirlos en diferentes formatos; el tamao elegido fue consecuencia de los clculos
estructurales que el tcnico de la planta, el ingeniero Jorge Medina Patrn, realiz.
Con los argumentos de abatir el problema de la falta de vivienda y la necesidad de producirlas a
bajo costo y alta calidad, se reconoceran las ventajas ya probadas de algunos de los prefabricados existentes, como lo fueron las viviendas de madera Hobson Houses, de las que se tenan muchos antecedentes; pero buscando mejorar los problemas de mantenimiento, costo y vulnerabilidad al fuego, del material natural, decidieron explorar el sistema prefabricado que ya exista en
otros lugares y que representaba mltiples ventajas en la economa del tiempo de construccin
66% menor al tradicional en economa de un 15 a un 20 por ciento menor en relacin a los
mtodos tradicionales de mampostera, as como la durabilidad y seguridad del producto.50
48
Elvia Mara Gonzlez Canto, entrevista realizada al ingeniero Mario Duarte Peraza pionero de los elementos
prefabricados presforzados el 7 de julio de 2007.
49
Mara Elisa Reyes Casares y Mara de Lourdes Fernndez F, entrevista realizada al Sr. Ernesto Casares Cano, presidente del Consejo de Administracin de la compaa Casas de Concreto Prefabricadas, S.A., el 18 de abril de 1991,
para trabajo de Historia, de la FAUADY, indito.
50
Diario del Sureste, 10 de noviembre de 1949.
207
Fig. 18 Propaganda de
una casa para sortear,
en donde se destaca que
los muros son de mampostera de 30 cm de ancho. Imagen tomada
del Diario de Yucatn, 29
de marzo de 1949, p. 6.
51
52
208
En funcin de esto, el inversionista principal, el Sr. Alfonso Capetillo Cirerol, les plante al arquitecto Carlos M. Castillo Montes de Oca y al Sr. Delio E. Alonzo formar una nueva compaa
en la que l pondra el dinero para otorgar crditos sobre las casas que ellos construiran con el
material de la fbrica; as surgi la compaa Impulsora Urbana de Yucatn, la cual trabajaba con
la primera, pero de manera independiente. La compaa Casas Prefabricadas, S.A. se encargaba
de la construccin de las casas y tambin de comercializar el material con otros constructores y
la compaa Impulsora Urbana de Yucatn otorgaba los crditos.53
Fue as como comenzaron un doble trabajo, por un lado se promocionaba el material y por otro,
se vendan las casas con crditos, construidas en su totalidad con el sistema prefabricado. En
uno de muchos anuncios en donde se promocionaban las casas, la constructora argument 14
razones en favor de las casas prefabricadas, stas fueron de diversa ndole: en lo econmico facilidades de pago, ahorro de dinero, ahorro de tiempo, material suficiente para que no se demore;
en lo tcnico, mayor resistencia, mayor duracin, diversas formas de bloques, menor humedad
por la calidad interna de los bloques, paredes enteramente de concreto, capacidad tcnica para
hacer construcciones a nuestra entera responsabilidad; y en lo ideolgico, tcnica moderna, mayor comodidad, menos vulgares y para cada construccin el mejor anuncio.54
En el discurso pronunciado por el inversionista principal, Capetillo Cirerol, ste manifest que
los motivos que los llevaron a emprender esta tarea fue la de de dotar de casas a los que no la
tienen: la casa es el fundamento de la patria; sin casa no hay hogar, sin hogar no hay familia y
sin familia no hay patria,55 por lo que hemos trabajado incansablemente y seguiremos hacindolo para crear una casa prctica, cmoda, conforme en lo fundamental con la arquitectura
funcional Fue claro el discurso, por un lado se manifest el deber para con la familia, usuarios
potenciales de esta arquitectura, y por otro, se destacan los beneficios de la tcnica y especialmente los aspectos de ndole funcional. Adems, enviaban mensajes ideolgicos que tenan que
53
Mara Elisa Reyes Casares y Mara de Lourdes Fernndez F, entrevista realizada al Sr. Ernesto Casares
Cano, op. cit.
54
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 19 de enero de 1950.
55
Op. cit., 10 de noviembre de 1949.
209
ver con el xito de la nacin vecina, y expresamente se declaraba en los anuncios56 que en Estados Unidos de Norteamrica se estaban reemplazando los ladrillos de arcilla por el nuevo material dadas sus cualidades como aislante contra el fro y el calor, por impedir la penetracin de
la humedad y, en consecuencia, por presentar ventajas sanitarias, por ser resistente al fuego y al
ataque de alimaas y por su permanencia y economa. El mensaje era claro, haba que estar a la
altura de la nacin en ese momento recin librada la segunda guerra mundial como vencedora.
El sistema constructivo57 consista en muros de block hueco de 15 x 20 x 40 de cemento vibrado
para los muros, en vanos para puertas y ventanas, cerramientos prefabricados y para las losas: vigas que servan de soporte a las dalas losas planas de concreto armado. Tambin fabricaban
columnas, bases y cerramientos de concreto armado.
Para el ao de 1949, a casi cinco aos de haberse implantado el sistema, ya se haban construido
ms de 100 casas de uno y dos pisos58 y ya se reciban comentarios favorables y la aceptacin
de numerosos profesionistas, entre ellos estaba el ingeniero Manuel Ambilis, quien expres
que las casas prefabricadas eran ms baratas, en lo que se refera a los techos, hasta en un 30
por ciento menos, y en lo ambiental, muy frescas, debido a la cmara de aire que haba en los
bloques de concreto.59
56
210
Estos profesionistas, cuando tuvieron la oportunidad de incorporar el sistema a la obra de gobierno, lo hicieron; entre ellas estuvieron las escuelas Jos Esteban Sols del ao 1948-1950, y la
Abelardo Trujillo de 1948, del arquitecto Manuel Ambilis; las Unidades de Urologa y Dermatologa del Hospital OHorn, del arquitecto Carlos M. Castillo Montes de Oca. La prensa destac
la rapidez de la ejecucin de la obra y seal que 500 m de construccin se haban realizado
en tan slo 63 das. Fig. 19
A pesar de esto, al ao siguiente tuvieron que cerrar el negocio ya que no era redituable en lo
econmico: era demasiada mquina60 En ese momento no haba la capacidad de consumo
que se requera para hacerlo costeable; la maquinaria se vendi a gente de La Habana, Cuba, y
al hacerlo, Yucatn se qued sin un producto de primera calidad. Ya con el camino abierto, otras
compaas pusieron fbricas con mquinas ms pequeas y posteriormente se instalaron otras
ms grandes.61
60
Mara Elisa Reyes Casares y Mara de Lourdes Fernndez F, entrevista realizada al Sr. Ernesto Casares
Cano, op.cit.
61
Idem.
211
Una de las casas donde se utiliz el sistema en su totalidad, tanto en muros como en losas, fue
la del Sr. Eduardo Torre Gamboa, ubicada en la calle 21 Nm. 86 de la colonia Mxico, la cual
se construy alrededor del ao de 1949; se pudo apreciar cmo el sistema determin las dimensiones de los espacios; en relacin al aspecto interior de las losas, el resultado guardaba algunas
reminiscencias con los sistemas constructivos del Porfiriato al acusarse las vigas por debajo (ya
no de madera) marcando un ritmo entre una viga y una superficie plana. En relacin al contexto
urbano, el sembrado en el lote se ubic aislado en el terreno y remetido, rodeado de vegetacin,
sin establecer lmite alguno con el espacio pblico. Sin duda se sumaron a la tendencia de diseo urbano de la nueva colonia, en donde se introdujo un nuevo concepto espacial urbano al
establecer una relacin directa y de fluidez entre el espacio pblico y semipblico, generndose
una nueva calidad ambiental, aspecto que fue caracterstico de sta y otras colonias del norte de
la ciudad.
El sistema constructivo, si bien representaba una modernizacin, lo hizo fundamentalmente en la
concepcin estructural y en la economa del tiempo de ejecucin62 (Fig. 20) ya que en lo formal
la preocupacin de sus promotores no estaba en el estilo de la casa (Fig. 21). Las casas prefabricadas () se pueden hacer de cualquier estilo, por ejemplo de tipo colonial, y a las piezas de
62
El 16 de agosto de 1948 se anunci en el Diario del Sureste la terminacin de obra de una casa en la playa en tan
slo 90 das. Como por arte de magia, fue tambin el mensaje que utilizaron para promocionar y exaltar la rapidez
de la construccin por el producto.
212
las casas as construidas se les puede dar cualquier dimensin63 declar en una entrevista el Sr.
Alfonso Capetillo Cirerol, inversionista principal de la fbrica. La mayora de los diseos que se
hicieron correspondieron en lo formal al neocolonial64 y art-dco, y en algunas se identificaron
formas protorracionalistas.
La introduccin de este nuevo sistema constructivo origin un cambio en la concepcin del
diseo arquitectnico al determinarse las medidas de los espacios de acuerdo con el mdulo
planteado por los elementos estructurales prefabricados. Con referencia al tratamiento formal,
como ya se ha mencionado, en muchas de las viviendas se us el dco y el neocolonial, con volmenes y ornamentacin sencilla, as como formas que ya anunciaban un protorracionalismo.
Se suprimi la ornamentacin en volmenes cuyas proporciones tendan a la horizontalidad,
aunque an seguan presentando un predominio del macizo sobre el vano; tambin incorporaron algunos elementos como marquesinas, volados y terrazas, que le daban ligereza al elemento,
ya que se mostraba el espesor de las losas, propio del sistema constructivo, y una evidente disminucin en el dimetro de las columnas que ellos mismos fabricaban. Fig. 22 y 23
63
64
213
En los inicios de la dcada de los cincuenta, se empez a anunciar otra fbrica que produca
bloques de cemento, llamada Productora de Materiales de Construccin, S. de R.L65 que ofreca
una amplia gama de materiales en diversas medidas (Fig. 24). En 1959 apareci Productos de
Cemento, S.A. y sta anunciaba bloques de concreto con gran variedad de medidas66 (Fig. 25),
en adelante aparecieron otras fbricas y distribuidores del block.
Si bien es cierto que desde la dcada de los cuarenta algunos constructores haban incorporado
el block en sus obras, en los aos cincuenta todava se siguieron haciendo construcciones importantes con mampostera; algunos signos ms de que aquello no era aceptado por el pblico se
haca evidente en varios anuncios en donde se le trataba como un material secundario y lo que
se destacaba era la mampostera.67 Algunas de las obras de equipamiento en donde se continu
65
214
usando la mampostera fueron: las Escuelas Presidente Miguel Alemn, en Kanasn, de 1950;
la Santiago Meneses y la Juan Crisstomo Cano y Cano, ambas en 1957, del ingeniero Ramn
Lpez Peraza; el Hospital Neuropsiquitrico, en 1953, del ingeniero Mario Duarte Carrillo; la
iglesia de Nuestra Seora de Ftima, de 1952, de los ingenieros lvaro Ponce Pen y Ulises
Gonzlez; la iglesia de la Sagrada Familia, en 1957, del arquitecto Enrique Manero Pen, entre
otras; en todas ellas se utiliz el sistema mixto de mampostera en muros y en los techos losas y
vigas de concreto armado.
Fueron pocas las construcciones grandes y de otros usos diferentes de la vivienda las que incorporaron el block en esta dcada, entre ellas estuvieron el Colegio Montejo, de 1953, de los
ingenieros lvaro Ponce Pen y Ulises Gonzlez; el Centro Mdico del Sureste, en 1955-1956,
del arquitecto Manuel Ambilis y sus colaboradores, el arquitecto Carlos Castillo Montes de Oca
y el ingeniero Mario Trava Imn; y el Centro de Salud, en 1958 (Fig. 26-28). En todas ellas, la
cubierta se resolvi con vigas y losas de concreto armado. La situacin en la vivienda residencial
fue diferente dado que en stas el block se incorpor recin iniciada la dcada.68
68
Elvia Mara Gonzlez Canto, Arquitectura residencial moderna en Mrida, 1950-1970, Tesis de Maestra,
FAUADY, Mrida, Mxico, 2000, p. 127 anexo.
215
Para la dcada de los sesenta aparecieron nuevas fbricas, entre las que estuvieron: en 1963,
Productora del Sureste, S.A. (PROSUSA), una planta productora de cal hidratada, que adems
produca bloques vibroprensados en una muy amplia variedad.69 En 1965 se fund la fbrica de
Materiales Itz (Mitza), que produca una amplia variedad de bloques y agregados que, para el
ao de 1969, ofreci un producto innovador: el medio block; ste permita usarse como columna o castillo sin necesidad de usar cimbra, adems que serva como remate en las esquinas, y
evitaba desperdicios.70 A pesar de que el uso del block se fue incorporando a todos los gneros,
en esta dcada todava se hicieron obras de importancia con mampostera: en 1967 el arquitecto
Alberto Castillo Zavala71 construy en la poblacin de Umn (municipio vecino a la ciudad de
Mrida) el Centro de Salud Rural. En la nota periodstica, adems de informar de lo que constaba, se destac que la obra estaba hecha totalmente de mampostera72 en la misma nota se
informaba tambin de la construccin del rastro municipal y de igual manera se destacaba que
estaba hecho todo de mampostera73
69
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 4 de octubre de 1964. La empresa produca, adems de cal hidratada, variados bloques de concreto: tabique, tabicn, de 10 x 20 x 40 de 2 agujeros; 15 x 20 X 40 de 2 y 3 agujeros; 20 x 20 x 40
de 2 y 3 agujeros; 30 x 20 x 40 y 20 x 25 x 56, especiales para techos. El block de dos agujeros se fabricaba ms ligero
y de menor resistencia, ya que no era para muros; se utilizaba para el filler block, y desaparecieron cuando surgi el
sistema de vigueta y bovedilla.
70
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 19 de abril de 1969.
71
El arquitecto Carlos M. Castillo Montes de Oca tuvo dos hijos arquitectos, Alberto y Carlos Castillo Zavala.
72
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 22 de julio de 1967.
73
Op. cit., 22 de julio de 1967.
216
Otro material de cemento que se produca desde las primeras dcadas del siglo XX fue la celosa
de cemento, llamado ornamental; estas piezas de diversos diseos no tenan caractersticas estructurales por lo que siempre se colocaban teniendo como soporte una estructura de trabes y vigas de concreto; tuvo su auge a finales de la dcada de los sesenta, al incorporarse a varias obras
en las fachadas con dos motivos, de tipo climtico y expresivo. Fueron varias las construcciones
en donde se destac en el diseo, enmarcada en el gran plano de la fachada. En uno de los gneros en los cuales se utiliz con mayor frecuencia fue el religioso otro fue el de abasto, en
los mercados ya que se incorporaba no slo como un material expresivo sino principalmente
para permitir la ventilacin natural o tamizar en orientaciones solares desfavorables, adems de
proporcionar la sensacin de liviandad en el volumen grande. Entre las iglesias que lo utilizaron
estuvieron: el santuario del Santo Nio de Atocha, en la colonia Sarmiento; santuario del Sagrado
Corazn de Jess, en la colonia Alemn; capilla de la Santsima Trinidad, en la colonia Castilla
Cmara, y San Judas Tadeo, en la colonia Daz Ordaz.74
Algunos edificios importantes por su significado social que incorporaron a su fisonoma la celosa fueron: el Instituto Tecnolgico de Mrida de 1962 (Fig. 29), la Unidad Mrida del Instituto
del Seguro Social del mismo ao (Fig. 30) y el Edificio de Planeacin del Gobierno del Estado
de 1966 (Fig. 31); los dos primeros fueron obras cuyos proyectos se trajeron del centro del pas
y se utiliz la imagen institucional, sin embargo, pese a esto, ambos conjuntos incorporaron el
material adecundose a los aspectos climticos y para dotar de liviandad los volmenes acusadamente longitudinales, caracterstico de la arquitectura moderna; el tercero de ellos, el proyecto del arquitecto Flix Mier y Tern Lejeune, tambin incluy la celosa, de igual modo por
cuestiones climticas (la fachada daba al poniente, orientacin de mayor incidencia solar) pero
sin duda alguna por la influencia del arquitecto Le Corbusier, y sus unidades habitacionales en
forma de cajas, suspendidas sobre grandes patas, dotadas de liviandad por el tratamiento formal
ahuecado, en este caso por la celosa.
74
217
En su momento, cuando se inaugur la obra, el ingeniero Manuel Mier y Tern, titular de la Direccin de Planeacin del Estado, declar:
la concepcin de la obra parti de la idea tridimensional de un conjunto en el que estuvieron representados detalles de la arquitectura maya, el concepto de la arquitectura moderna aplicada a nuestro
medio y esa visin futurista que, aunque queda definida en un momento histrico para comprender la
arquitectura distintiva de un pueblo, no pierde en los aos de la generacin que lo vive ni la actualidad
de sus estructura ni la vigencia de su funcionalidad.75
75
218
Otros elementos construidos con concreto armado fueron los llamados brise solei o partesoles,
parteluces, cartelas; elementos prefabricados y de dimensiones muy esbeltas, generalmente alargados, que se colocaban en las fachadas que reciban mayor incidencia solar para su proteccin y se convirtieron en parte fundamental de su expresin plstica. Entre los edificios que los
emplearon se pueden mencionar: el edificio del peridico Novedades de Yucatn, el edificio El
Aladino y la Central Quirrgica (Fig. 32-34).
En el edificio del peridico Novedades de Yucatn76 (1965) del arquitecto Fernando Lpez Escalante y obra del ingeniero Agustn Pen de Regil, ubicado en el centro de la ciudad, el arquitecto
dispuso el edificio remetido al paramento para dejar paso en su fachada principal a una zona de
estacionamiento; la volumetra que plante fue un paraleleppedo suspendido, asentado sobre
otro, cuya horizontalidad se vio acentuada por el vano corrido, el tratamiento formal se enriqueci por el empleo de celosas y cartelas; la gran caja suspendida se matizaba con el juego de
luces y sombras que producan las celosas y los cartelas propias de la arquitectura icnica del
maestro Le Corbusier. Si bien es cierto que la propuesta rompi con todo lo establecido en el sitio
histrico, encontramos una respuesta al momento cultural y al lugar.
El edificio se ubic mirando hacia el poniente, orientacin ms desfavorable en donde la incidencia solar es muy fuerte, aunado a las altas temperaturas propias en Yucatn, por ello el empleo
76
219
de las celosas y las cartelas se presentaron como una solucin altamente congruente, para controlar y mitigar la temperatura al interior del pasillo distribuidor al que daba la celosa.
Como se ha visto, lo comn de la dcada de los sesenta fue la incorporacin en los muros del
block estructural y en varios casos la celosa ornamental, fundamentalmente con fines climticos;
en lo que respecta a la solucin estructural en cubiertas, se dio un giro total y se diversific de
acuerdo con las mltiples posibilidades plsticas del concreto armado, la incorporacin de la
vigueta y bovedilla, as como los elementos de concreto reforzado y presforzado, tema que se
desarrolla a continuacin. (Fig. 35)
220
La dcada de los sesenta signific un cambio en el modo de construir, si bien algunos materiales
prefabricados ya se haban incorporado al proceso constructivo, an no se trabajaba con los elementos pretensados y presforzados que en otras partes del pas y del mundo ya se utilizaban.
En el ao de 1960, el Ing. Mario Duarte Carrillo implant en Yucatn el sistema de techos y entrepisos de viguetas pretensadas y bovedillas, y cre un proceso industrial para la produccin de
la vigueta; en palabras del ingeniero Duarte, simple y econmico; este sistema lo utiliz por
primera vez en el Sureste en la construccin del edificio que albergara el estacionamiento subterrneo, el mercado Garca Rejn77 y el Catastro (Fig. 36). Para que la gente pudiera apreciar el
sistema y probar que tena la resistencia adecuada, el ingeniero Duarte arm un tramo de techo
en la acera y lo prob aadindole carga, esa prueba permaneci varios das en el lugar, a la vista
de todos.78 El edificio se estructur con trabes y columnas de concreto armado sobre las cuales se
asentaron las viguetas y bovedillas; dicha estructura se remeti ocultndose detrs de la sucesin
de bandas slidas que parecan flotar en el volumen, dejando paso a las ventanas de esquina.
La inclusin generalizada del vidrio para esta dcada (tema que se abordar ms adelante), los
conocimientos estructurales y la habilidad del proyectista, permitieron un edificio con las caractersticas estructurales, funcionales y expresivas propias del movimiento moderno.
Fig. 35 Anuncio de productos prefabricados por
Mitza. Imagen tomada del
Diario de Yucatn, 19 de
abril de 1969.
Fig. 36 Estacionamiento
subterrneo, mercado Garca Rejn y Direccin de
Catastro del Estado, 1966.
77
78
221
El ingeniero Mario Duarte Carrillo permanece activo a la fecha y sigue produciendo estos elementos estructurales
y muchos ms. La trabelosa se sigue construyendo para el mismo claro.
222
requera el espacio libre de columnas para poder maniobrar los vehculos. En la iglesia del Santo
Nio de Atocha (1961), el arquitecto Flix Mier y Tern dej volar hacia el frente las trabelosas,
como un remate del volumen, adems, colocndolas en forma de arco; en lo funcional, el claro
libre resultante en congruencia con las nuevas ideas que ya se adelantaban al Concilio Vaticano
II, en donde se estableca que no deba haber obstculos entre el rea de fieles y el presbiterio.
En el Colegio Rogers Hall (1964) el ingeniero Fernando Roche Martnez utiliz en diferentes
reas la trabelosa con la finalidad de librar grandes claros en la cancha de basket ball y en
el vestbulo de acceso, en este ltimo las dej volar en los extremos para permitir la salida
de aire caliente que sube por el volumen; en el mercado Santos Degollado, construccin del
Departamento de Obras Pblicas, se aprovech el claro libre para disponer los puestos en el
interior, las trabelosas se asentaron en una estructura de trabes y columnas de concreto y se
dej volar a los extremos como proteccin de los lmites cubiertos con celosa; en la Secundaria Federal Nmero 1 (1964), el arquitecto Carlos Castillo Zavala utiliz la trabelosa entre el
pasillo de conexin de los mdulos de edificios de la secundaria (hecha con los mdulos del
CAPFCE) en donde dise las columnas de soporte inclinadas continuando con el perfil de la
losa, explotando su expresividad. En el Aeropuerto de la ciudad, de 1970, el arquitecto Enrique Manero Pen de igual modo aprovech el claro resultante de la estructura y las incorpor
como un elemento expresivo fuerte al dejarlas acusadas al frente a lo largo de sus casi 100
metros de largo.
Su uso fue generalizado y utilizado en otros edificios, potenciando tanto sus caractersticas estructurales, expresivas y funcionales. Entre otros tantos estuvo: el Centro de Accin Social y
Educativa Nm. 54, en 1964, del arquitecto Carlos Castillo Zavala, as como agencias embotelladoras y bodegas.
223
Indudablemente las posibilidades del concreto armado empezaron a ser explotadas y dieron pie
a otras expresiones formales y espaciales, entre las que estuvieron los cascarones de concreto80
y la techumbre en forma de paraguas invertidos y, en menor caso, los paraboloides hiperblicos;
estos sistemas se usaron principalmente en gasolineras, mercados e incluso en algunas casas, ya
fuera en forma de paraguas, paraboloide, o como pequeas bvedas. Destacan con este sistema
el mercado de Santa Ana (1959), de paraguas invertidos, obra del ingeniero Rubn Encalada
Alonzo; la gasolinera Servicio Lpez, en 1961, de los ingenieros Eloy Cceres y Luis Fernndez
Lope; en todas estas obras el soporte nico de los paraguas y la altura de los mismos permitan
un espacio libre de obstculos y con un gran volumen de aire, adems, en los laterales quedaban
80
El 18 de febrero de 1960 se anunci en el Diario de Yucatn una conferencia del Ing. Rubn Cuevas Cantillo, dirigida a ingenieros, arquitectos y pblico en general del tema Clculo y procedimientos empleados en la construccin
de cascarones de concreto, esto hablaba de lo innovador o del desconocimiento del tema.
224
espacios en forma de frontones en los cuales se podan colocar celosas para el ingreso de aire
(particularmente en los mercados) y lograr una ventilacin cruzada; este sistema se utiliz principalmente en mercados y gasolineras, fue por ello que en la casa de la familia Rivas Marrufo,
de 1964, del ingeniero Juan Jos Terrats Mongiote, se resolvi el espacio para la cochera con
un paraguas. La duea81 manifest que durante muchos aos se le conoci como la casa de la
gasolinera. (Fig. 43-46)
81
Elvia Mara Gonzlez Canto, Arquitectura residencial, op. cit., pp. 122-127.
225
Las posibilidades que la piedra lquida armada proporcionaba eran innumerables, por lo que
conjugando el comportamiento estructural de la forma del elemento y las propiedades del concreto armado dieron pie a explorar trabes en forma de arco para lograr bvedas de can corrido, que dieron como resultado grandes claros y reas libres de apoyos; la cuestin del gnero,
al igual que con los otros sistemas, fue indistinto; lo mismo se us para iglesias, teatros, salas de
exhibicin, en fin, en aquellos usos que requirieran un gran espacio libre de obstculos, ya fuera
por visuales (para el caso de las iglesias y auditorios), o para tener libertad de movimiento (particularmente en las salas de exhibicin de autos). El tratamiento formal respondi a los aspectos
de tipo climtico, ya que se aprovecharon los tmpanos de los arcos para colocar celosas y lograr
adems de un juego formal en fachada y un cruce de ventilacin.
226
En el santuario del Sagrado Corazn de Jess, 1962, del arquitecto Enrique Manero Pen, el
gran can de la fachada con un claro de 30 metros, que fue resultado de la forma estructural,
permiti una fachada limpia, dividida por columnas y trabes que se acusaron y que delimitaron
a nivel de piso las puertas y arriba, en una trama conformada por los elementos estructurales
y celosa; en la agencia de autos Ford Torre, ao de 1963, el arquitecto Miguel ngel Cervera
Mangas plante el mismo tambor, pero dividido en fachada por una gran una lnea producto de
una losa volada hacia el frente que recort la figura geomtrica y protegi el interior del sol del
poniente (orientacin de la fachada); en el tmpano del gran arco se tamiz con una celosa
de lmina trenzada para la proteccin del sol y proporcion un juego entre las lneas, resultado
del volado y el perfil del tambor. Una solucin muy interesante fue la que el ingeniero Rubn
Encalada Alonzo utiliz en el teatro de la Escuela Secundaria Agustn Vadillo Cicero, en el ao
de 1962, donde us una estructura mixta formada por una gran losa plana de dimensiones muy
delgadas, con un claro de 20 metros aproximadamente, colgada de una serie de arcos, de secciones muy ligeras, para conformar el espacio para el auditorio libre de obstculos visuales; adems
de la complejidad estructural, result un volumen interesante con una marcada direccionalidad,
producto de la secuencia de los arcos hacia el escenario; en la organizacin espacial dispuso el
escenario al poniente para tapar la orientacin ms desfavorable. Fig. 47-50
Otra variante de expresin formal producto del dominio del concreto armado en trabes y columnas, consisti en mostrarlas en fachada, como se utiliz en la Panificadora Montejo, en 1956, en
donde aparecieron a manera de grapas que envuelven el volumen.
227
En esta dcada tambin se construyeron algunas obras en donde se utilizaron una variedad de
sistemas constructivos, dependiendo del uso de los espacios y la expresividad que el constructor
quera imprimirle a la obra; de este grupo destaca la Casa de la Cristiandad, de 1964, del arquitecto
Fernando Lpez Escalante; en este conjunto incorpor diversos sistemas, como la trabelosa, techo
canal, casetones, estructura metlica en trabes y columnas, y losa de concreto armado. Sin duda
alguna en esta obra se puede resumir la intencin de modernizacin de la arquitectura al emplear
los sistemas constructivos ms avanzados al momento y al lugar e integrarlos funcionalmente a la
obra, aprovechando las cualidades plsticas y formales de cada uno de ellos. Fig. 51-54
228
Rubn Vega, La industria de la construccin en Yucatn, Tesis de Maestra en Arquitectura, Universidad Autnoma
de Yucatn, Mrida, Mxico, 1995, pp. 126, 127.
229
En cuanto a la distribucin del vidrio en las dcadas de los cuarenta al setenta, estuvo a cargo
nicamente de dos proveedores importantes y unos cuantos menores. En los aos cuarenta
slo se consigna a Jorge Millet S de R.L., y aparece en 1957 el segundo ms importante, VitroLux S.de R.L.de C.V, que introduce a mediados de la dcada de los sesenta el aluminio anodizado.83 Ambas empresas ofrecan todo tipo de vidrios transparentes o labrados, de 3 a 6 mm,
vitroblock, entre otros productos. En 1969, Jorge Millet S de R.L. present en un anuncio que
deca: lo ms nuevo y maravilloso en el mundo del cristal, cristal flotado, claro, gris, bronce,
valioso elemento para la arquitectura moderna, industria automotriz, escaparates, lunas finas
84 Como se pudo constatar, el comercio del vidrio y el cristal estuvo monopolizado por parte
de las dos compaas mencionadas.
Los gneros en los que se us con mayor incidencia fueron: bancos y agencias de automviles,
aunque tambin se us en otros, como el comercial; su uso se limit a secciones en fachada.
A finales de los cincuenta, hizo su aparicin en edificios en donde la volumetra tena un marcado predominio del vano sobre el macizo y una pronunciada horizontalidad. Las dos obras que lo
incorporaron fueron del mismo arquitecto Flix Mier y Tern Lejeune, en 1958: el Banco de Comercio de Yucatn, construido con el ingeniero Franz R. Fortuny, y Autos Torre, edificado con los
ingenieros Mario Duarte Carrillo y Ramiro Bojrquez. En ambas obras se acusaron los elementos
geomtricos, bandas, lneas y planos que, conjugados con las transparencias, conformaban la
volumetra; la inclusin de soportes revestidos de piedra asentaban el volumen en el Banco y en
la agencia de autos constitua el pivote que daba equilibrio a la composicin. La transparencia,
propiedad del material, permiti que se establecieran fluencias visuales entre el interior y el exterior; en el Banco se dejaron expuestas las reas de atencin al pblico (tapadas parcialmente
con protectores de herrera por motivos de seguridad). En la resea de la prensa se mencion
que la perspectiva del exterior permite poner todo a la vista de cualquiera.85 En la agencia de
autos, tanto la transparencia como el lugar de emplazamiento y su forma curva, respondiendo a
la esquina, destacaban la exhibicin de los autos. Fig. 55 y 56
83
230
En la dcada de los sesenta, la utilizacin del vidrio adquiri un predominio y los volmenes y
planos parecan flotar al ocultarse los apoyos muchos de ellos columnas esbeltas, metlicas o
de concreto detrs del cristal. Al igual que en la dcada precedente, se establecieron fluencias
visuales entre el interior y el exterior por el vidrio empleado; de nuevo se utiliz en bancos y
agencias de autos, y la planta libre de grandes claros resultaba ideal para el funcionamiento de
estos usos. Algunas obras fueron el Banco del Sureste, Sucursal Montejo, de 1960, y Banco Nacional de Mxico, S.A. Sucursal Mrida, de 1963, del Arq. Gustavo Struck B. y construccin del
arquitecto Flix Mier y Tern e ingenieros Manuel Rodrguez Pen y Franz Fortuny, adems de
la Sala de Exhibicin y Ventas de Toyota del Sureste, en 1961. La resea que la prensa hizo del
Banco de Mxico deca el edificio () ser eminentemente funcional y contar con todo el
espacio, comodidad y confort de un banco moderno.86 De su tratamiento formal se seal es
la misma fachada en ambos sentidos, es decir, interior y exterior, y se compone de abajo hacia
arriba, de lienzos de cristal, armados con soportes de aluminio.87 Sin duda alguna se pona de
manifiesto las cualidades del vidrio que posibilitaban las fluencias espaciales que, conjugadas
con la planta libre, permitan una prolongacin del espacio. Fig. 57-59
86
87
231
Casi a mediados y hacia el final de la dcada de los sesenta aparecieron edificios en donde el
predominio del cristal era absoluto; al margen de la forma en la volumetra, ya fuera de acusada horizontalidad o en forma de caja, que responda al uso y al volumen de construccin. Tres
edificios destacan por su tratamiento: la Biblioteca Carlos R. Menndez, de 1964, del arquitecto
Leopoldo Tommasi Lpez; el hotel Mara del Carmen, de 1965, del arquitecto Fernando Lpez
Escalante y el ingeniero Agustn Pen de Regil, y el edificio para oficinas de finales de los aos
sesenta, uno de los pocos edificios en donde se incorpor el muro cortina; en los dos ltimos
se utiliz el sistema de trabes y columnas de concreto armado que permitieron adecuarse muy
bien al uso asignado; ambos edificios se ubicaron en el centro de la ciudad, rompiendo con el
alineamiento de la estructura histrica.
232
En el hotel Mara del Carmen, el arquitecto Lpez Escalante opt por dos grandes volmenes
unidos por un elemento esbelto conformado por una losa apoyada en dos columnas; los volmenes se hallaban flanqueados por dos patas con un frente hueco acristalado, cuya manguetera de
aluminio formaba bandas horizontales, que constituan cada uno de los pisos. Estas transparencias obedecan al uso y la inclusin de estas grandes superficies acristaladas tambin respondan
a la orientacin norte la ms favorable de la fachada, en las orientaciones este y oeste, las
de mayor insolacin; estos volmenes fueron planteados ciegos para no permitir el ingreso del
sol. Fig. 60
En el edificio para oficinas se incorpor la solucin del muro cortina, que consista en una fachada acristalada sin funcin estructural, la cual se fijaba a las columnas situadas detrs de sta. El
edificio lo constituy un gran volumen aligerado por el tratamiento de sus lmites acristalados que
coronaba una base remetida correspondiente al primer nivel del edificio. La solucin de la manguetera de aluminio en el volumen superior se dispuso de modo tal que hace que se perciba como
una sucesin de franjas horizontales, con la intencin de ocultar las losas interiores, pronunciar
una horizontalidad y lograr la percepcin de una menor altura. En cuanto a su orientacin, el edificio ubicado en esquina presenta dos fachadas, la principal al norte orientacin favorable y
la segunda al poniente, la ms desfavorable; a pesar de tener la orientacin norte en su superficie
mayor, las altas temperaturas del verano y el ingreso del sol del poniente, producen un efecto de
invernadero que ha hecho que los pisos superiores con mucha dificultad se habiten, propiciando
altos consumos en el aire acondicionado. Este edificio es uno de los pocos que se construyeron en
la ciudad en esta poca; se destac no slo por su tratamiento formal sino por su altura, aspecto
que slo lo haban manejado los hoteles, sin embargo no tuvo xito; la disponibilidad de terrenos
en planta baja, la costumbre de no subir escaleras o ascensores y ms tarde los aspectos de tipo
climtico, fueron algunas de las diversas razones de su poca aceptacin. Fig. 61
El arquitecto Tommasi plante la biblioteca como una gran caja levantada del piso con muy
pronunciada horizontalidad, en donde acus los elementos verticales y estableci una fluencia visual gracias al empleo del vidrio transparente, desde la fachada hasta la parte posterior
del edificio.
233
El volumen es una sola planta libre a doble altura, que slo se cort por una largusima losa, que,
como una lnea, divida el volumen acentuando sus horizontalidad y protegiendo la fachada de
acceso con orientacin sur-oeste. El giro del edificio respondi a la esquina hacia el parque de
las Amricas, a la vez que le permiti una longitud mayor para el desarrollo de la misma. Los
aspectos de tipo climtico los resolvi estableciendo una ventilacin cruzada entre las fachadas
principal y posterior con orientaciones sur-oeste y nor-este. Fig. 62
Como consecuencia de lo anterior, se puede afirmar que la incorporacin de los nuevos sistemas
constructivos y materiales prefabricados industrializados si bien se iniciaron en la dcada de los
cuarenta con el block vibroprensado y el sistema constructivo de dalas y cerramientos del arquitecto Carlos Castillo y asociados, alcanz a ser asimilado y adoptado de manera generalizada a
finales de los cincuenta; este fenmeno se dio principalmente con los arquitectos que le trabajaron a la iniciativa privada, con excepcin de aquellas obras emprendidas por los arquitectos
Castillo y Ambilis, para el Estado.
Fue en la dcada de los sesenta cuando a travs del ingeniero Mario Duarte Carrillo se inici el
camino hacia los sistemas prefabricados industrializados para losas con elementos pretensados y
presforzados; el primero fue el sistema vigueta y la bovedilla, al que le siguieron el techo canal,
234
la losa doble T y doble T, entre otros; a este proceso se sum la fabricacin industrializada
del hormign premezclado, por parte del mismo ingeniero.
Las posibilidades plsticas del concreto armado y el dominio que los constructores tuvieron
para explotar stas, produjeron como consecuencia una variedad de expresiones formales, plsticas y espaciales interesantes, las cuales fueron desarrolladas tanto por ingenieros como por
arquitectos; un hecho comn en todas las dcadas de estudio fue la asociacin de ingenieros
con arquitectos.
As mismo, se pudo notar que el lenguaje y la espacialidad, derivado de la tcnica y los nuevos
materiales, no fue selectivo; lo mismo se utiliz en obras de un gnero u otro como en aquellas
promovidas por la iniciativa privada o por el Estado; en consecuencia, privaron lenguajes y espacios universales a los que se les dot de alguna caracterstica para su distincin; la utilizacin de algunas expresiones arquitectnicas, derivada de los materiales y los sistemas constructivos por parte
del Estado, llegaron a Mrida ya como imgenes institucionales, que, en algunos casos, tuvieron
modificaciones, esencialmente para la adecuacin a las condiciones ambientales de Mrida.
La introduccin del vidrio como muro cortina no fue de uso generalizado, su empleo se limit a
las orientaciones ms favorables. La inclusin del vidrio en grandes ventanales obedeci a factores comerciales; sin embargo, en muchos casos, contrariamente a lo que se ha credo, para las
orientaciones sur y poniente ms desfavorables, los vanos se protegieron con elementos ligeros
de concreto llamados parteluces, parasoles o cartelas.
nuevos y el pueblo. En este aspecto el papel del discurso ser fundamental, deber ser eficientemente trasmitido, para lograr que sea aceptado y comprendido y que llegue a las personas a las
cuales fue dirigido. Uno de los mass media de gran efectividad es el peridico, cuyo discurso se
presenta a travs de la escritura y las imgenes.
El objetivo de este apartado es mostrar cmo, a travs de la comercializacin de bienes de consumo, de uso cotidiano, o para la construccin del hbitat, el discurso de los especialistas y los
mensajes caricaturizados de la prensa inciden en la ideologa de la modernidad. Se muestra
tambin cmo algunos de estos aspectos se convirtieron en coadyuvantes en el proceso de modernizacin de la arquitectura.
236
Los elementos esenciales que coadyuvaron para instalar el consumismo fueron la publicidad y
las ventas a crdito. Este modelo se fue arraigando y fue la televisin la que permiti su difusin
masiva; tambin se estimulaba a travs del cine, la radio, los diarios y las revistas.
Los anuncios publicitarios en cualquiera de estos medios sugeran la posibilidad de acceder a
un mundo ideal y fantstico, deseo que se lograra a partir de comprar determinados artculos y
marcas; este hecho lleg incluso a permear a las manifestaciones artsticas.88
Esta avalancha de artculos era de todo tipo y tena la finalidad de satisfacer las aspiraciones y
la realizacin tanto de hombres como de mujeres modernos; la campaa publicitaria estaba
planteada en esos trminos. Para la mujer, se pretenda que la vida en el hogar se le hiciera ms
fcil, para dejarle tiempo a su persona, y para el hombre, se trabajaba la imagen de xito que
representaba poseer ciertos artculos, entre los cuales destacaba el automvil.89
En la dcada de los cuarenta esta publicidad lleg a Mrida a travs de los peridicos y de la
radio; posteriormente, en los cincuenta hicieron su aparicin las revistas extranjeras, principalmente de Estados Unidos, con temticas variadas. En 1953 se anunci la llegada de la revista
Life en espaol, anunciando que en ella se encontraran cientos de bellas fotografas que
prcticamente ponen el mundo en sus manos,90 prueba del ideal del mundo fantstico que se
quera sembrar en el imaginario; esto se sum a los medios mencionados. En la dcada de los
sesenta apareci un elemento ms de penetracin masiva, la televisin, que, junto con el cine
que permaneca desde la dcada anterior, se constituyeron en un elemento ms en la penetracin de manera masiva.
En la ciudad de Mrida fue hacia finales de los aos cuarenta cuando empezaron a promocionarse una serie de artculos de uso domstico destinados a la mujer, como licuadoras, estufas,
lavadoras y refrigeradores, y aunque algunos de ellos ya se vendan en el mercado, stos se
88
237
mostraban con adelantos tecnolgicos que superaban a los existentes y que podan sustituir el
trabajo manual con creces.91
El advenimiento de estos artculos y otros ms se reflej en la arquitectura y, en este caso, tambin
en lo urbano, especficamente en Mrida con la apertura de la llamada nueva calle comercial
63-A, en el centro de la ciudad. En una sola calle se congregaron 38 comercios92 con diferentes
giros, en los cuales se poda satisfacer necesidades diversas; esta accin se constituy en el antecedente de las tiendas departamentales. Fig. 63
Por su parte, para el hombre tambin se publicitaban objetos, entre los que sobresala el automvil. En la ciudad de Mrida, a finales de los cuarenta, haba cuatro agencias que vendan
diferentes marcas extranjeras; todas ellas tenan sus salas de exhibicin y venta en el centro de la
ciudad, en edificios modificados para ese uso.93
91
Op. cit., 12 de junio de 1947. En uno de varios anuncios se publicitaba una lavadora que poda realizar todos
los movimientos ella sola.
92
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 3 de julio de 1949. Algunos de los giros de los tiendas eran: zapatera, corsetera, sombrerera, artculos para el hogar, perfumera, telas, lencera, cmaras fotogrficas, radios, equipos de msica,
joyera, entre otros.
93
Compaa Distribuidora de Automviles S.A., distribuidor de Ford, en calle 62 Nm. 514 x 65, en Diario de
Yucatn, 1 julio de 1947; Automviles del Sureste, distribuidor de Ford, en calle 59 Nm. 506, en Diario de Yucatn,
20 noviembre de 1948; y de Studebaker en la calle 60 x 61, en Diario de Yucatn, 3 febrero de 1949; Automotriz del
Sureste S.A., distribuidor de Chevrolet, en calle 63 y 64 Nm. 503, Edificio las Monjas, en Diario de Yucatn, 5 de
mayo de 1949; Olegario Montes S.A., distribuidor de Chrysler, en la calle 61 Nm. 491, en Diario de Yucatn, 19 de
mayo de 1949, y De Soto, en Diario de Yucatn, 16 de julio de 1949.
238
En la dcada de los cincuenta una gran cantidad de artculos electrodomsticos y de comunicaciones aparecieron con mayor fuerza en Mrida; los adelantos tecnolgicos en electrnica, fsica
y qumica que se haban dado despus de la segunda guerra mundial en Estados Unidos y otros
pases, haba ocasionado un gran incremento de la produccin industrial, y stos llegaron con
ms fuerza y, como ya se seal, accesibles a los sectores medios y bajos al mercado consumidor. La publicidad y las ventas a crdito sin duda alguna coadyuvaron al consumismo. El discurso
de los anuncios hablaba de innovaciones tecnolgicas, de grandes beneficios en la optimizacin
del tiempo, de aparatos capaces de sustituir a la persona, de clase y de estilo, en consecuencia,
de modernizacin en la vida del ser humano.
As, se anunciaban en la prensa en lugar de refrigeradores, modernos frigidair;94 la Singer presentaba la aspiradora como la sirvienta mgica,95 como si sta fuera capaz de sustituir a la persona;
de la lavadora se incorporaba la electrosnica y se deca que Lava por vibracin snica () el
agua atraviesa la tela a la velocidad del sonido y en todas direcciones;96 el entretenimiento del
cine ya era capaz de llegar hasta las casas, y se podan adquirir proyectores sonoros familiares
desde 8 mm hasta el de 16 mm profesional;97 de la reproduccin del sonido se anunciaban consolas con moderno sonido estereofnico;98 las fotografas ya eran posible a color y se anunciaban
revelados, ampliaciones y duplicados en color, en los primeros y ms modernos laboratorios de
color en el sureste;99 la optimizacin del tiempo llevada a la cocina gracias a la olla Presto ahora
en 30 minutos lo que antes empleaba 3 horas;100 los satisfactores en el hogar, como los acondicionadores de aire,101 se ofrecan para estar como en una eterna primavera y la radio se ofreca
modernsima, con tres bandas para recepcin mundial,102 entre otros muchos aparatos.
94
239
Ese ambiente de consumismo y a la vez de innovaciones tecnolgicas conllevaba a modernizaciones en otros mbitos; as, el Diario de Yucatn anunci que haba contratado el servicio
de radiotelefoto que la agencia de United Press proporcionaba y que gracias a los adelantos en
materia de telecomunicaciones haba sido posible perfeccionar, por lo que haba adquirido un
equipo de radiotelefotografa103 que haca posible tener acceso a la noticia grfica al minuto.
En 1952, uno de los distribuidores ms importantes de radios Phillips, Distribuidora Mercantil,
adelantndose a la llegada de la televisin, realiz una transmisin diferida104 de un programa de
televisin en un telerreceptor Phillips en los aparadores de ese negocio, anunciando de ese modo
lo que sera la televisin; hecho que tard una dcada ms.
Si bien la llegada de todo tipo de aparatos modernos fue muy numerosa, stos se siguieron
vendiendo en muchos de los establecimientos comerciales existentes; entre las tiendas ms importantes que se abrieron estuvieron: en 1950, la tienda Sears Roebuck, que se estableci en los
bajos del edificio que aos antes haba construido la Peninsular, con la posibilidad de acceder a
los productos a crdito; en 1954 se inaugur la joyera denominada La Joya de Mxico, ubicada
en la calle 59 x 58, el edificio en esquina utiliz sta como el pivote y con un muro cncavo
dispuso en ella la vidriera principal para dar paso a dos alas de pronunciada horizontalidad por
el manejo del muro cortina, el alfeizar y el volado superior, y rompi el alineamiento al remeter
la planta baja y dejar un gran hueco transparente. Fig. 64. Los tiles escolares y los libros tambin
fueron merecedores de la arquitectura moderna, en 1956, La Literaria, nombre de una librera
importante ubicada en el centro de la ciudad en la calle 63 entre 60 y 58; plante un volumen
principal que respet el alineamiento pero salt hacia delante una caja inclinada que enmarcaba la fachada, para otorgarle en el interior de la misma una serie de de bandas horizontales
producto de la ventana corrida, el letrero y las vidrieras. Fig. 65
Philco de Yucatn S.A., distribuidor de radios de la misma marca, abri en 1959 un tienda ubicada en calle 56 x 63, en donde rompi con la volumetra de los edificios preexistentes, por el
103
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 29 de septiembre de 1955. La primera transmisin de fotografas por radio
fueron del primer juego de la Serie Mundial de Bisbol, en el Yanqui Studium.
104
Op. cit., 27 de marzo de 1952.
240
manejo de una gran caja que enmarcaba una vidriera, asentaba sobre unas columnas que marcaban un ritmo entre los paos de cristal de la fachada en planta baja. Fig. 66. Los tres edificios
anteriormente mencionados se resolvieron en el interior con el sistema de trabes, columnas y
losas de concreto armado; en los muros se utiliz el block vibroprensado.
Con la venta de automviles105 sucedi lo mismo: se siguieron empleando los antiguos establecimientos y haciendo adaptaciones en algunos edificios del centro, como lo fue la agencia Studebaker106 (1953), ubicada cercana al barrio de Santa Ana. Sin embargo, en 1958, se construy ex
profeso la refaccionaria Torre ubicada en la calle 59 x 70, en el barrio de Santiago, que inclua
adems de la venta de refacciones para todas las marcas la distribucin de autos de la Datsun;
el proyecto lo realiz el arquitecto Flix Mier y Tern107 y utiliz una volumetra compleja, rica
en acabados y texturas, con remates en esquina para dejar visibles los autos en exhibicin, o
como pivote para balancear la composicin; se puede afirmar que con este edificio se inici la
construccin de arquitectura moderna en edificios destinados para tal uso. Fig. 67
Fig. 64 La Joya de
Mxico, 1954.
Fig. 65 Librera La Literaria,
1956. Imagen tomada del
Diario de Yucatn el 15 de
julio de 1956.
105
Automotriz del Sureste abri otra agencia para la distribucin del Lincoln en la calle 62 Nm. 514, en Diario de
Yucatn, Mrida, Mxico, 26 de mayo de 1953; Juan E. Millet abri una agencia distribuidora de Nash, en la calle 60
Nm. 425, en Diario de Yucatn, 23 de octubre de 1950.
106
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 22 de septiembre de 1953. Se ubic en la calle 60, entre 47 y 49.
107
El arquitecto Flix Mier y Tern fue autor de numerosas viviendas en las colonias Mxico y Buenavista a partir de
la dcada de los cincuenta y durante los sesenta, en donde destin como parte de la composicin un lugar privilegiado
al automvil. Elvia Gonzlez Canto, op. cit., pp. 139-150.
241
La dcada de los sesenta fue sin duda alguna la de la televisin; los anuncios que acapararon la
atencin fueron los numerosos modelos de televisores que aparecieron desde que se anunci,
en 1961, la futura instalacin de la televisora en Yucatn.108 La reaccin de los comerciantes no
se hizo esperar y un gran nmero de tiendas comenzaron la venta de esos aparatos para estar
preparados para el momento de la llegada de la televisin; stos los promocionaban en diferentes
precios, tamaos y al alcance de cualquier persona, con sistemas cmodos de pagos a plazos;
incluso la Magestic,109 una marca comercial de aparatos electrnicos, lanz al mercado un modelo llamado Mrida, para conmemorar tal acontecimiento.
Fue as como en 1963 se inaugur la Televisora de Yucatn, S.A. en un edificio en la calle 64
del barrio de Santa Ana, proyectado por el arquitecto Fernando Garca Ponce y construido por
los ingenieros lvaro Ponce Pen y Ulises Gonzlez Torre; el edificio haca un homenaje a tal
acontecimiento, signo de modernizacin, ya que se dise con los materiales, formas y atrevidos
planteamientos estructurales que reflejaban la modernidad arquitectnica; grandes superficies
acristaladas, pronunciada horizontalidad, inclusin de esbeltsimas columnas metlicas y un
atrevido volumen volado eran congruentes con el uso simblico del edificio. Fig. 68 y 69
108
109
242
243
La dinmica comercial que se suscit en la ciudad en esta dcada fue muy intensa y se introdujeron nuevos conceptos comerciales que se vieron reflejados en la arquitectura; la difusin del
producto asociada al espacio, el marketing, introdujo el concepto de centro comercial, supermercado y las tiendas departamentales se consolidaron.
El primer antecedente de los supermercados en Mrida se tuvo en 1948, cuando se inaugur en
los portales del parque de Santa Luca, en el centro de la ciudad, el primer supermercado anunciado al estilo estadounidense. Lo novedoso fue el interior de la tienda, dispuesta con anaqueles
en los que se exhiba la mercanca y se poda tener acceso directo a ellos, con esto surgi el
autoservicio en Mrida. Esta tienda se llam Casa Barbosa.110
En 1963 se inaugur el primer centro comercial, con establecimientos de diferentes giros, teniendo como tienda ancla el supermercado de la cadena Minimax.111 Este centro comercial, a
diferencia de la primera calle nueva de la 63-A de la dcada de los cuarenta y del Pasaje Yucatn112 del mismo ao, se desarroll en un solo terreno en donde tanto tiendas como vialidades
y estacionamiento se congregaron en el mismo sitio, con la particularidad que se proyect fuera
del centro y los barrios histricos. Se ubic en la avenida Coln entre las calles 60 y 62; con esta
accin se dio inicio a la descentralizacin de los servicios comerciales del centro y los barrios.
El proyecto del centro comercial Minimax, realizado por el arquitecto Juan Jos Daz Infante y
obra de los ingenieros lvaro Ponce Pen y Ulises Gonzlez Torre; se anunciaba en la prensa
como el mayor y el ms moderno supermercado en el Sureste, con un diseo moderno y funcional; con nuevo sistema de descuento y autoservicio, en una superficie de ms de 1000 m. El
planteamiento del esquema consisti en disponer los locales en forma de c, en cuyo interior se
dispuso un camelln que divida el transito de los vehculos y el estacionamiento. El tratamiento
110
244
formal de los locales fue muy sencillo, bsicamente se perciban dos bandas, una maciza y otra
transparente, que le daban la vuelta al espacio, en la primera se disponan los letreros, y en la
otra, la superficie acristalada permita la exhibicin de los productos; lo verdaderamente innovador fue el concepto de centro comercial, as como el de autoservicio a esa escala que se plante
en el supermercado.
Al ao siguiente, los empresarios113 que contrataron esta obra decidieron incursionar con el
mismo concepto en otros lugares de la ciudad, as apareci Komesa Santiago114 en el barrio del
mismo nombre y otros ms en diferentes emplazamientos. Fig. 70 y 71
En el centro de la ciudad Sears Roebuck construy su propio edificio, un gran paraleleppedo
macizo asentado sobre una base remetida, dotada de transparencias por las vidrieras destinadas
a la exhibicin de los productos de los diferentes departamentos que la tienda manejaba; lo que
result innovador fueron los diferentes departamentos que la tienda albergaba, el aire acondicionado y el lujo de los acabados. Fig. 72
113
245
En el centro de la ciudad, se continu con la demolicin de los predios antiguos para dar paso a
un sinnmero de construcciones destinadas a la venta de los artculos ms variados que haba en el
mercado: aires acondicionados, muebles de oficina y para el hogar, medicinas, etc. El tratamiento
formal y espacial se orient bsicamente en tres direcciones: a) en las esquinas, como lo fue el caso
de la Fundacin La Yucateca (Fig. 73), con construcciones en su mayora de dos plantas que continuaron con el chafln, abrieron grandes vanos en planta baja y agregaron marquesinas en puertas
y ventanas; b) en aquellas que rompa totalmente con el alineamiento a la calle, dando paso a un
espacio para albergar un estacionamiento, y c) construcciones que se alineaban a la escarpa en
planta alta, pero se remetan en planta baja; en todas ellas se presentaba una volumetra horizontal,
con predominio del macizo en planta alta y superficies vidriadas en planta baja. Fig. 74-77
246
Fig. 73 Fundacin La
Yucateca. 17 noviembre
de 1965.
Fig. 74 Compaa Comercial del Sur. Imagen tomada
del Diario de Yucatn el 2
febrero 1965.
Fig. 75 Distribuidora
York. Imagen tomada del
Diario de Yucatn el 3
octubre 1966.
Fig. 76 Canto Distribuidora. Imagen tomada del
Diario de Yucatn,
23 noviembre 1967.
Fig. 77 P.M. Steel. Imagen
tomada del Diario de Yucatn, el 14 de abril de 1967.
247
El automvil era un artculo que ya desde los cuarenta haba penetrado en la sociedad, sin
embargo, fue en los sesenta cuando apareci una mayor diversidad de marcas, pases de procedencia y costos. Los anuncios publicitarios seguan siendo numerosos y la introduccin de gran
variedad de automviles trajo como consecuencia la construccin de edificios ex profeso para
exhibir y vender esos productos.
La publicidad era llamativa y en el discurso escrito era comn encontrar asociaciones al modo de
vida estadounidense, a la clase, distincin, comodidad, modernidad, entre otros aspectos; en lo
referente al discurso grfico, se podan ver escenas de parejas felices y una fuerte asociacin con
la vivienda.115 Estos dibujos mostraban residencias con caractersticas de la arquitectura moderna, volados, transparencias, desniveles, asociados al automvil. Fig. 78, 78 A y 78 B
Fig. 78 Imagen tomada del
Diario de Yucatn, 15 de
marzo 1953.
Fig. 78 A Imagen tomada
del Diario de Yucatn, 26
de mayo 1953.
Fig. 78 B Imagen tomada
del Diario de Yucatn, 12
noviembre 1965.
Una caracterstica muy importante fue que estos edificios se construyeron en otras reas de la
ciudad, fuera del centro y de los barrios histricos. Con la construccin de la Refaccionaria Torre
en el barrio de Santiago, en la dcada de los cincuenta, se inici tambin el xodo de dichos
negocios hacia otras zonas de la ciudad; los dos emplazamientos preferidos fueron: en la prolongacin del Paseo de Montejo, zona de la ciudad de alta plusvala y estatus, y en la avenida Aviacin, zona que se empezaba a conformar en industrial, a la salida de la ciudad por la carretera a
Campeche y camino hacia el aeropuerto de la ciudad.
115
248
Las caractersticas arquitectnicas de las agencias empezaron a cambiar; los lmites de cristal
desaparecieron y quedaron grandes espacios sin paredes, tan slo limitados por las cubiertas
sostenidas por ligeras columnas muchas veces metlicas, de dimetros muy reducidos; de este
modo se poda admirar mejor los autos y entrar libremente y deambular entre ellos; se poda
sentir que stos eran realmente accesibles. Fig. 79-82
249
250
Por lo anterior, es posible afirmar que el estilo de vida estadounidense lleg a Mrida ms tarde
que en otros pases o regiones, pero con el mismo efecto; esta dinmica comercial y de consumismo de bienes y servicios fue uno de los principales motivos de la introduccin de la arquitectura moderna en Mrida.
Los agentes modernizadores en su mayora fueron los profesionistas locales, sin embargo, en lo
concerniente al comercio, tanto de bienes de primera necesidad anteriormente adquiridos en
los mercados como de artculos para el hogar y el individuo, fue a travs de modelos extranjeros
ya probados en la ciudad de Mxico, modelos que llegaron a ella de Estados Unidos y que se
trajeron a Mrida, tal fue el caso del centro comercial Minimax y la tienda departamental Sears
Roebuck. Las formas, materiales, tcnicas y funcionamientos empleados fueron en muchos casos
principalmente en la dcada de los sesenta, congruentes con los artculos y el mensaje consumista que se quera plantear.
Lo anterior denota claramente el etnocentrismo hacia Estados Unidos; en lo relativo al modo de
vida, se copiaba para ser como los otros. La ideologa del consumismo de la clase del poder econmico estuvo presente en todo momento y sin duda alguna el poder econmico se materializ
a travs de la implantacin de estos modelos de arquitectura.
251
ingeniero en la sociedad moderna, haciendo notar las cualidades del profesionista como una
persona ilustrada, capaz de dirigir las fuerzas de la naturaleza y los materiales en favor de la raza
humana, y lo defina como el creador y actor de los nuevos tiempos, por tanto, al pendiente de
lo que se suscitaba en otros pases; en consecuencia peda el reconocimiento al trabajo de los
profesionistas, en una poca en donde no haba muchos en el medio y causaba trabajo cambiar
los hbitos de la gente que comnmente empleaba a maestros de obras, contratistas y albailes,
por tanto, era un llamado a reconocer las virtudes que estos profesionistas tenan.
Por su parte, el arquitecto Carlos Castillo Montes de Oca, el mximo exponente de la arquitectura neocolonial en Yucatn, planteaba la discusin de la tradicin contra el modernismo ante
el arribo de la arquitectura moderna en el mundo y en Mrida. Es importante sealar que a
pesar de las preferencias formales del arquitecto, ste posea una visin moderna en tanto crea
que era posible sumarse a la modernizacin de la arquitectura mediante los sistemas constructivos prefabricados.118
En el artculo l reconoca el valor de la arquitectura moderna y haca un llamado a los tradicionalistas que parecan temer enfrentarse a la arquitectura contempornea sin el puntal del estilo
colonial y sealaba que:
Ambos campos (los tradicionalistas y los jvenes radicales) estn de acuerdo en postular la tradicin
como elemento esttico, y por consiguiente extinguido de nuestra cultura (). El desconocimiento de
su carcter y valor real ha inducido a unos () a copiar servilmente viejos estilos. A los otros, a creer
que es esencialmente necesario enterrar la anticuada como intil sarta de cnones y reglas, ya definitivamente muertas.119
Ni unos ni los otros, lo que haba que tener en cuenta era que la tradicin no implicaba inhabilidad para cambiar o reajustarse, ya fuera a nuevas tcnicas constructivas o a nuevas normas so118
En el ao de 1949, en los meses de octubre y noviembre, se public en el Diario del Sureste extensas entrevistas
a los socios de la compaa Casas de Concreto Prefabricadas, Carlos Castillo Montes de Oca y Delio Casares Cano,
en donde explicaron un nuevo sistema constructivo y las caractersticas de la fbrica que haban montado, con miras
a crear una arquitectura nueva, ms rpida y econmica.
119
Carlos M. Castillo Montes de Oca, Tradicin contra, op.cit.
252
ciales. Haca un reconocimiento a los arquitectos Frank Lloyd Wright, Gropius, Breuer y otros, en
tanto que haban enriquecido el acervo arquitectnico con estructuras de mrito, proporcionando a la nueva generacin de arquitectos la visin de un estilo que naca, sealando que ciertos
principios del estilo internacional () irrespectivamente (sic) de su ubicacin () podan () ser
descritos como formas, materiales y mtodos basados sobre cnones tcnicos y biolgicos adoptados en todo el mundo.120 Dejando de lado el aspecto emocional, las costumbres, uso, historia,
tradicin, entre otros aspectos, Ideas por las cuales el hombre vive, ha sido necesariamente
ignorado para obtener internacionalidad o internacionalismo.121
Reconoca que los internacionalistas haban tenido xito al expresar lo liviano de los materiales
modernos, en implantar el uso del vidrio tanto tcnica como estticamente, y en cambiar la idea
antigua de que el edificio estaba constituido slo por muros perimetrales cargadores, agregando
que: Los internacionalistas nos dicen que el pasado no existe (triste calamidad), que el presente
se forja mecnicamente y que el futuro, del cual nos permiten un atisbo, ser de una estandarizacin biolgica completa122
Al respecto de lo que se estaba haciendo en la ciudad de Mrida, seal que haban empezado a surgir numerosos adefesios que no decan nada, que su mensaje era mudo, y afirmaba que:
Nuestro acervo tradicional es muy rico, y tengo la impresin de que el estilo moderno no est en pugna
con muchas de nuestras tendencias tradicionales. No veo nada antagnico a las lneas horizontales, a
los techos planos, a las distribuciones funcionales ni a los grandes ventanales en nuestra arquitectura
maya o colonial de siluetas tan geomtricas. Si acaso, deberamos reajustar las grandes superficies de
vidrio, imprcticas para nuestro sol y clima, a un maridaje discreto con persianeras y celosas que
tambin nos dicen algo del pasado.123
120
Idem.
Carlos M. Castillo Montes de Oca, Tradicin contra, op. cit.
122
Idem.
123
Carlos M. Castillo Montes de Oca, Tradicin contra, op. cit.
121
253
La posicin del arquitecto Castillo era de apertura a la nueva arquitectura, sin embargo, no a
aquella que por denominarse internacionalista se olvidaba de las caractersticas del sitio, afirmando que era posible resolver esa pugna y hacer una arquitectura moderna adecuada al lugar.
Leopoldo Tommasi Lpez, Urbansticas, Anarqua, Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 23 de febrero de 1950.
254
2. Plante el problema del congestionamiento vial del centro de la ciudad de Mrida, poniendo como ejemplo las soluciones implementadas en la ciudad de Mxico, as como el
planteamiento de centros comerciales en cada nuevo ncleo de poblacin.125
3. Inform del VII congreso Panamericano de Arquitectos realizado en La Habana, Cuba,
destacando la temtica tratada del urbanismo moderno como el camino para la modernizacin de las ciudades.126
4. Propuso la rectificacin y pidi la modificacin de alineamientos en favor del peatn,
poniendo como ejemplo a seguir el edificio de Seguros La Latinoamericana, que se estaba
construyendo en la calle 58 x 60, remetido de los alineamientos de la traza histrica en
ambas calles;127 evidentemente todava no le importaba respetar las caractersticas bsicas del tejido histrico, l slo pensaba en una ciudad que proporcionara comodidades
al ciudadano.
5. Alab las acciones llevadas a cabo por el Estado en torno de calles y avenidas, que, a su
decir, contribuan a que la ciudad perdiera su tradicional aspecto de pueblo al incorporar
avenidas como la Itzaes, la que conduca a la Miguel Alemn, la avenida Coln y Prez
Ponce; as como la calidad de las construcciones arquitectnicas y la amplitud de las calles de las colonias Mxico y Pensiones y el nmero de vehculos y transporte pblico que
hacan que tuviera ms el carcter de gran ciudad.
6. Peda que en un futuro cercano se privilegiara el crecimiento en vertical, y en consecuencia, la redensificacin, ya que el horizontal sin lmites haca que la densidad por manzana
fuera muy baja y la dotacin de los servicios fuera ms difcil de llevar.128
125
Leopoldo Tommasi Lpez, Metropolitana, op., cit., Mrida, Mxico, 6 de abril 1950.
Leopoldo Tommasi Lpez, Congreso, Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 27 de abril de 1950.
127
Leopoldo Tommasi Lpez, Alineamientos, op. cit., 25 de mayo de 1950.
128
Leopoldo Tommasi Lpez, Tridimensionalismo, op. cit., 15 de junio de 1950.
126
255
7. Promova la construccin de centros multifamiliares para cientos de personas como solucin a la demanda de habitacin barata y accesible, pero que a su vez planteaban nuevos
problemas relacionados con el transporte para tantas personas congregadas en un solo sitio.129 Destacaba la importancia de los espacios libres, ya que consideraba la ciudad como
una inmensa casa donde se viva, por lo que propona exigir dejar mayores porcentajes en
los fraccionamientos.
Lo anterior y muchas otras reflexiones y posturas del arquitecto en torno de la arquitectura y,
sobre todo, del urbanismo moderno, llevaron a Tommasi a publicar su libro.
256
Leopoldo Tommasi Lpez, La ciudad de ayer, de hoy y de maana, Editorial Zamn, Mrida, Mxico, 1951, p. 40.
Ibid. pp. 53-77.
133
Ibid. p. 56.
132
257
En la dcada de los cincuenta, fueron sus escritos los que prevalecieron e intentaron hacer conciencia tanto a autoridades, profesionistas, como a la ciudadana en general, sobre lo que se
haca y lo que faltaba por hacer, con miras a convertir a Mrida en una ciudad moderna.
En la dcada de los aos sesenta el arquitecto Tommasi radicaba en la ciudad de Mxico y desde
all sigui enviando peridicamente artculos al Diario de Yucatn, acerca de lo que aconteca
en el medio.
l en esta dcada incorpor a su discurso el patrimonio; cuando se refiri a los cincuenta aos
como arquitecto de Manuel Ambilis Domnguez hizo notar los criterios de diseo y composicin que emple en la tendencia neomaya, que describi como no imitacin sino analoga,
no eclecticismo sino esencialismo manifest que su arquitectura no triunf por la llegada de
la tendencia funcionalista que impeda la existencia de todos los estilos,135 siempre al respecto del neomaya, dedic otro escrito del cual dijo que lleg a lo caricaturesco, lo cursi y lo
rampln.136 Tambin seal que la influencia avasalladora incostratable (sic) y tremenda de la
arquitectura moderna lleg a Mxico en aquel entonces y se adue de la voluntad y simpata
134
Ibid. p. 220.
Leopoldo Tommasi Lpez, Bodas de oro de Manuel Ambilis como arquitecto Diario de Yucatn, Mrida,
Mxico, 17 octubre de 1962.
136
Leopoldo Tommasi Lpez, Urbansticas, Nuestra arquitectura no es mexicana, Diario de Yucatn, Mrida,
Mxico, 5 de octubre de 1961.
135
258
137
259
sealando, entre otros conceptos, que no deba de confundirse la sencillez con la falta de imaginacin, ni la extravagancia con la originalidad.142
Siendo un frreo defensor de la arquitectura moderna, en estos aos su discurso iba y vena entre
la defensa de lo moderno y los valores de la historia; manifest su inconformidad con la demolicin del monumento dedicado a los iniciadores de la industria henequenera que se levant
en la glorieta ubicada en el cruce de las avenidas Itzaes y Coln;143 sin embargo, consider que
la construccin del nuevo mercado Santos Degollado del barrio de Santiago, era un acierto, a
pesar de que sustitua un proyecto de Manuel Ambilis, de tendencia neomaya; consideraba que
el nuevo mercado era adecuado en la forma constructiva, programa arquitectnico, amplitud,
circulacin, comodidad e higiene, en el orden de la geometra de sus volmenes y por la modulacin de su estructura.144
Leopoldo Tommasi Lpez, Urbansticas, El temor a las superficies lisas II, Diario de Yucatn, Mrida, Mxico,
5 de noviembre de 1964.
143
Leopoldo Tommasi Lpez, Breve historia de una glorieta, op. cit., 2 y 3 de diciembre de 1964.
144
Leopoldo Tommasi Lpez, Nuevo Mercado Municipal, op. cit., 10 de diciembre de 1964.
260
1961 a 1965;145 ese ltimo ao se le comision la realizacin de estudios para mejorar la red de
caminos de Yucatn para enlazar principalmente las zonas arqueolgicas con el fin de impulsar
el turismo,146 para lo cual se le comision por parte de dicha Secretara y del Instituto Nacional
de Antropologa e Historia, para asistir al Congreso Mundial de Arquitectos realizado en 1965
en Pars, con la finalidad de estudiar los sistemas viales modernos en Francia, Italia y Espaa,147
como dio cuenta de ello la prensa.
El mismo ao el arquitecto Manero represent a Yucatn en el primer Congreso Nacional de
Arquitectos celebrado en Guanajuato;148 y un documento presentado por el arquitecto Manuel
Orvaos Maza en dicho evento fue enviado por el arquitecto Manero para su publicacin, ya
que trataba sobre la problemtica de los arquitectos en provincia; se estimaba que 90% de los
arquitectos del pas ejercan en la capital, Guadalajara y Monterrey, por cuestiones de trabajo, ya
que el gobierno federal realizaba desde la ciudad de Mxico todos los proyectos de provincia,
sin conocer a detalle el tipo de suelos, materiales disponibles, costos, etctera.149
Posteriormente, fue representante honorario del Departamento de Monumentos Coloniales del
INAH, de 1961 a 1968, y representante del INAH en Yucatn y Quintana Roo, de 1968 a 1973.150
El arquitecto Manero Pen fue tambin nombrado residente de la Secretara de Obras Pblicas
en la construccin del Aeropuerto Internacional de la ciudad de Mrida entre 1966 y 1970.151
Sin duda el trabajo del arquitecto Manero Pen fue relevante en el mbito del patrimonio, que
tuvo un impacto a partir de su llegada y con ms fuerza en la dcada de los aos setenta; de
1963 a 1989, realiz mltiples trabajos de consolidacin, restauracin, liberacin de fachadas
145
261
entre otros en numerosos templos catlicos entre ellos estuvieron: la Catedral de Mrida, el
templo del Carmen, de la Mejorada, San Juan Bautista, San Juan de Dios, Santa Isabel, Santiago, San Cristbal, Monjas, Itzimn, Chuburn; entre muchos otros y en numerosos poblados
del Estado.152
Otros profesionistas exponan sus preocupaciones en otras temticas que tenan que ver fundamentalmente con el problema del agua potable, la falta del reglamento de construcciones,
entre otros: en relacin con el problema de la introduccin del agua potable y los problemas
que ste haba suscitado, el presidente de la Asociacin de Ingenieros y Arquitectos de Yucatn,
el ingeniero Hernn Prez Vega, escribi sobre el tema e incluy recomendaciones sobre el tipo
de pavimentos a emplear en la reparacin de las calles abiertas para introducir la red hidrulica,
presupuestos y opiniones para mejorar las condiciones del sistema de desage pluvial.153
La Seccin Yucatn del Colegio de Ingenieros Civiles de Mxico eligi nueva directiva en 1961,
y fue nombrado como presidente el Ing. Jorge Medina Patrn, uno de los temas que se trataron
fue la formacin de un reglamento de construcciones para la ciudad de Mrida.154 A finales de
la dcada, por parte del Estado a travs de los Servicios Coordinados de Salud, se plante la
necesidad de un Reglamento sobre Ingeniera Sanitaria, y de nuevo la necesidad de contar con
un nuevo reglamento de construcciones en el estado, as como la aprobacin de un Registro de
Peritos en la Direccin de Obras Pblicas del Ayuntamiento.155
En el ao de 1969 se cre el Colegio Yucateco de Arquitectos, su primer presidente fue el arquitecto Enrique Manero Pen.156
152
Idem. Adems de realizar varios proyectos de residencias modernas en la zona norte de la ciudad.
Hernn Prez Vega, La introduccin del agua potable y la repavimentacin de Mrida, Diario de Yucatn,
Mrida, Mxico, 25 de abril de 1965.
154
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 25 de junio de 1961.
155
Op. cit., 14 de febrero de 1968.
156
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 29 de julio de 1969. La directiva estuvo constituida por los arquitectos Enrique Manero Pen como presidente, Fernando Lpez Escalante como secretario, Alberto Castillo Zavala como tesorero
y Juan Jos Terrats Monjiote y Eric Daz Palma como vocales.
153
262
Sin duda alguna el protagonista principal en el discurso de la crtica, el anlisis y las propuestas
en torno de la arquitectura y el urbanismo moderno fue el arquitecto Leopoldo Tommasi Lpez,
la participacin de otros profesionistas fue en temticas puntuales.
Uno de los efectos ms graves de la inclusin de la arquitectura moderna en el tejido histrico
fue su destruccin, y al margen de la calidad que pudieron tener algunas obras, el resultado fue
en detrimento del mismo; al respecto el arquitecto Tommasi (en los cuarenta) contribuy con la
destruccin del sitio al edificar el edificio de La Peninsular lo que criticara aos ms tarde en
los sesenta al mismo tiempo que era un protagonista muy importante de la escultura neomaya;
en la dcada de los sesenta construy la Biblioteca Carlos R. Menndez en donde incorpor los
cdigos de la arquitectura moderna y la solucin fue adecuada al sitio.
El arquitecto Manero Pen quien fuera representante Honorario del Departamento de Monumentos Coloniales del INAH de 1961 a 1968 y posteriormente representante del INAH en Yucatn
y Quintana Roo, de 1968 a 1973, construy en el centro de la ciudad el hotel Casa del Balam
en el cual, a pesar de que dej la casona colonial como parte del mismo, integr para el rea de
cuartos un volumen gravitando en una base remetida del alineamiento; cuya expresin formal a
pesar de intentar adecuarse a la arquitectura del sitio, por el tratamiento formal otorgado hacen
ver una fuerte influencia funcionalista. Estos hechos demuestran que el ambiente modernizador
de la arquitectura prevaleci esa dcada a pesar de estar presente ya el concepto de patrimonio.
Por su parte, el arquitecto Carlos Castillo Montes de Oca demostr tanto con sus actos como en
el discurso congruencia entre ellos.
a travs de un texto muy breve y una ilustracin por dems elocuente, por lo que este recurso
resultaba (y hasta ahora lo es) sumamente impactante y quizs hasta ms efectivo en la penetracin hacia los lectores.
En Yucatn la caricatura se inici a mediados del siglo XIX con la introduccin del grabado; fue
Gabriel Vicente Gahona Picheta el iniciador de esta labor, quien con el personaje de Don Bullebulle tuvo el primer peridico humorstico en Yucatn en el ao de 1847. A esta publicacin le
siguieron La Linterna de Nini Moulin, en 1850, La Burla en 1860-1861, y despus de una pausa
hasta 1892; Eduardo Urzaiz y Miguel Noguez, quien firmaba como Becuadro, realizaron las
caricaturas para la revista humorstica Pimienta y Mostaza; en el nmero veinte de esa revista se
inclua una seccin caricaturesca denominada Metropolitanas, a cargo de Escalante y Zubieta,
que trataba temas urbanos exclusivamente de la ciudad de Mxico.
Posteriormente a estas publicaciones le siguieron varias hasta que en 1906 se inici la publicacin de La Campana, revista humorstica de mayor importancia en esos aos en Yucatn, no slo
por la duracin de la misma (nueve aos) sino por el gran nmero de caricaturistas que participaron en ella; entre los variados temas que tocaban se encontraban los relacionados con los vicios
polticos y sociales, el ruido citadino, aspectos antihiginicos de la ciudad, el desamparo de los
pobres peatones, entre otros; es de destacar los temas relacionados con la ciudad, la higiene, la
seguridad, etc., que eran aspectos que preocupaban y que se trataban en la prensa, ya fuera de
forma seria o caricaturizada.157
Sin embargo, fue a partir de 1917 con la publicacin de La Semana Cmica158 que comenz el
perodo moderno de la caricatura en el estado de Yucatn, referencia que hizo porque empezaron a aparecer algunos caricaturistas que haban estudiado en la Academia de San Carlos; tal fue
el caso de Juan Arthenack, quien adems haba trabajado en la ciudad de Mxico en la creacin
de tiras cmicas para los peridicos Exclsior, El Universal y El Universal Grfico. Ese mismo ao
apareci un semanario festivo y de caricaturas, llamado Chispas, cuyo dibujante principal fue
157
Yucatn en el Tiempo. Enciclopedia alfabtica, tomo II, Ciudad de Mxico, 1998, pp. 90, 91.
Ibid. p. 91. Los principales caricaturistas de la Semana Cmica fueron Juan Artkhenack, Francisco Snchez Rejn y Xavier Batista, este ltimo se caracteriz por hacer caricaturas tanto de tipos como de situaciones.
158
264
Alonso Rejn Montalvo, considerado como el mejor caricaturista del siglo; esta revista haca
mofa de todo y de todos y aprovechaba las situaciones tanto polticas como de otra ndole. A estas revistas le siguieron muchas otras con nfasis diferentes; entre 1930 y 1940 surgieron varias,
entre ellas Risas, La Caricatura (1930-1970) y Sabatino, en sta se ensay combinar fotografas de
rostros con cuerpos caricaturizados.
Sin embargo, llegada la dcada de los aos cuarenta, la penetracin cultural de Estados Unidos
era muy fuerte hacia Mxico y a Yucatn; aparecieron una gran cantidad de revistas de historietas
estadounidenses159 que se publicaron tambin en los peridicos en el formato de tiras humorsticas; las historietas de Lorenzo y Pepita, Mickey Mouse, Dirk Drake, fueron algunas de ellas; esta
embestida de historietas de factura estadounidense propici que las expresiones de humorismo
grfico local en las dcadas de los cuarenta y cincuenta fuera prcticamente nula.
Con el advenimiento de la dcada de los cincuenta, junto con las historietas de Disney, empezaron aparecer unas caricaturas en donde segn desde la perspectiva de quien se mire, contenan
una crtica o propaganda a la arquitectura moderna; es importante hacer notar que para mediados de esa dcada ya haba comenzado la crisis del movimiento moderno y este tema estaba
presente en el discurso norteamericano; sin embargo, en el mbito local se poda hacer otra
lectura e interpretacin de esas mismas imgenes.
Una lectura de estos mensajes, tanto del texto como del dibujo, han puesto de manifiesto los
conceptos ideolgicos que las acompaaban. Los temas de la higiene, la funcionalidad y, sobre
todo, la pureza en las formas geomtricas empleadas en la arquitectura y el despojo de los historicismos, fueron algunos de los temas preferidos.
En la figura 83, correspondiente a la caricatura aparecida en el ao de 1947, el texto manifest
una crtica a la falta de servicios bsicos para las viviendas; especficamente para los servicios
sanitarios, aspecto primordial para la higiene; sin embargo, en la lectura hecha de la imagen, se
observ la persistencia de formas tradicionales norteamericanas, lo cual reforz el nfasis en lo
159
Ibid. p. 92.
265
relativo a la importancia de los servicios bsicos. En otra caricatura, fig. 84, de 1954, se destac
tanto en el texto como en la imagen uno de los aspectos fundamentales de la arquitectura moderna, su funcionalidad, y su atributo de poder utilizar todo el espacio posible.
En definitiva, uno de los aspectos ms polmicos de la arquitectura moderna fueron sus formas rectas, volmenes puros y limpios, desprovistas de ornamentos, lejos totalmente de los
historicismos; las caricaturas de figuras 85, 86, 87 y 88 ilustran estas crticas al grado de llevar
estas posturas arquitectnicas a todos los mbitos de la vida; la modernismos no slo estaban
presentes en la arquitectura sino en todas las acciones en las que se involucraba el individuo.
Las figuras 85 y 86 ilustraban esto ltimo por doble va, por un lado se manifestaba la inquietud
de cmo estos modernismos, especficamente en la adopcin de las formas cuadradas y rectas, podan tener un reflejo en lo aspectos cotidianos de la vida y cmo la arquitectura poda
condicionar a formas de vida; y por otro, se enfatizaba a travs de los dibujos de las casas la
presencia de formas geomtricas puras, con volados, losas delgadas y ventanas en esquina, en
la arquitectura de sus viviendas.
266
La nostalgia hacia las formas de los historicismos, la aceptacin de las formas nuevas y la rivalidad entre tradicin y modernidad, fueron aspectos que tambin se manifestaron en el discurso;
en las figuras 87 y 88, stos se pusieron de manifiesto tanto en el dibujo como en el discurso
escrito, las figuras de la arquitectura aparecieron con formas geomtricas puras, rectas y limpias de ornamentacin, as como tambin formas tradicionales y textos en los que se destacaba
de manera abierta la nostalgia hacia las formas del pasado.
En resumen, en estas caricaturas que empiezan a aparecen desde finales de los aos cuarenta
y a lo largo toda la dcada de los cincuenta, se puede percibir claramente una crtica hacia la
arquitectura del movimiento moderno, pero tambin una propaganda fuerte hacia sus atributos
principales; la forma, funcin, optimizacin del espacio, negacin de los estilos del pasado, formas de vida establecidos a partir de la arquitectura, la importancia de la higiene, fueron algunos
de los contenidos trasmitidos.
La penetracin de estas ideas a travs de un doble discurso tenan un objetivo claro: implantarse
en el imaginario de las personas y transmitir la ideologa de la modernidad por medio de los
modernismos de la arquitectura.
267
En la dcada de los sesenta vuelven a tener una participacin notoria los caricaturistas locales;
adems de las historietas norteamericanas de hroes y villanos, tanto en el formato de revista
como en el de tira en el peridico, van a aparecer en la prensa, en forma caricaturizada, crticas
de aspectos sociales, polticos y econmicos.
Fue un tema recurrente y sumamente caricaturizado el problema de la dotacin del agua potable y su altos precios; como se vio en el segundo captulo, la intencin de modernizacin de la
ciudad, dotndola del servicio de agua potable, comenz desde la dcada de los cuarenta, pero
no fue sino hasta entrada la dcada de los sesenta cuando se introdujo; aparejado a este aspecto
estaba tambin el planteamiento de tarifas sumamente altas; con el argumento de poder tener
una recuperacin pronta, esto suscit una ola de artculos tratando el problema y desde luego,
caricaturas acerca de la misma problemtica.
T y tu arquitectura moderna!
Oh, claro que me gusta lo moderno, pero los viejos castillos tenan dignidad!
En el ao de 1967, ante el proceso tan errtico de la introduccin del servicio del agua potable a
la ciudad, a lo largo de tantos aos y de un sinnmero de argumentos, y cuando pareca que al fin
se concluira, aparece en la prensa una caricatura (Fig. 89) en donde de nuevo manejando el
268
doble discurso en forma escrita y grfica se anuncia a manera de edicto, que se suspenderan
las obras relacionadas con el agua potable, ponindose como pretexto los juegos olmpicos que
se realizaran al ao siguiente, por lo que no llegara el recurso econmico, hecho que manifestaba la dependencia econmica que para esas dcadas ya tena el Estado de la Federacin; y en
forma grfica se observaba la vestimenta de los personajes propios de la poca de la Colonia, en
consecuencia se poda leer como un problema que pareciera tan viejo como la Colonia misma.
Los mensajes de las caricaturas de las figuras 90, 91 y 92 eran una crtica poltica para el problema del costo del servicio; en la figura 90 se ilustr la sesin del Congreso,160 en donde la Legislatura aprob las tarifas propuestas y tambin las posibles consecuencias de no aprobarla. Desde
luego que ante la aprobacin de las tarifas la respuesta no se hizo esperar y aparecieron varias
caricaturas en las cuales se asociaba el alto costo de stas con el incremento de otros productos
de consumo bsico.
160
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 2 de agosto de 1967. Se rese la sesin del Congreso, en donde se inform que en tan slo media hora se aprobaron las tarifas del servicio de agua potable; y en otra nota del mismo da se
inform del acoso a un ciudadano por parte de unos policas por haberse atrevido a hacer pblica su inconformidad
al alto precio de las tarifas del agua potable.
269
Otras temticas caricaturizadas en la misma dcada y que tambin tenan que ver con la modernizacin, pero en diferentes mbitos, fueron las relativas a los problemas urbanos, entre ellos los
viales y sus modernas soluciones. En la figura 93 se present una stira de cmo las soluciones,
aunque modernas, pueden no acabar con un problema; tambin se hizo alusin a un viejo problema, la falta de vivienda: en la figura 94 se ilustr el crecimiento desmedido de dicha problemtica que se tena desde haca varias dcadas, y la aparente sorpresa ante ste; y no poda faltar
el ambiente modernizador de la sociedad, en la figura 95 se observ cmo se ilustraba el nuevo
papel de la mujer en la sociedad y la igualdad entre hombres y mujeres.
Fue en la dcada de los cincuenta cuando el discurso de la ideologa de la arquitectura moderna,
sus modernismos y la idea que sta era extensiva a un modo de vida, se intent incorporar al imaginario de la gente como una preparacin al advenimiento de lleno de la arquitectura moderna
en los aos sesenta en Mrida.
270
En los sesenta el discurso se caracteriz por abocarse a problemticas de tipo social, poltico y
econmico, inherentes a la modernizacin de la ciudad y de la sociedad. La efectividad del discurso radic en lo creativo y divertido de las imgenes y en el texto mismo.
Ya fuera a travs de los bienes de consumo del discurso de los especialistas, o los mensajes caricaturizados, el ambiente modernizador se vivi al igual en cada una de las dcadas; en los aos
cuarenta se inici este proceso con tan slo algunas acciones preparatorias, en la dcada de los
cincuenta todo conflua hacia el modernismo y la modernizacin, para que luego, en la dcada
de los sesenta, estuviera entronizado en todos los aspectos de la vida del ser humano. La ideologa de la modernidad etnocntrica, de manera directa e indirecta, triunf al penetrar mediante
los bienes de consumo y el discurso, logrndose su materializacin en la arquitectura.
271
272
CAPTULO 4
LA MODERNIZACIN ARQUITECTNICA EN GNEROS
DE IMPACTO SOCIAL Y SIMBLICO
En este captulo se hizo un anlisis en particular de tres gneros arquitectnicos: salud, educacin y religin, estos gneros se ubican dentro de los llamados edificios monumentales, portadores de simbolismos, y formaron parte importante del desarrollo cultural al contribuir a la creacin
de lenguajes arquitectnicos al servicio de una colectividad, capaces de dirigir la vida social,
vinculados directamente a la vivienda. Si partimos de que los servicios colectivos comprenden:
Los servicios de orden sanitario: aprovisionamiento de agua potable, evacuacin de los desperdicios y
organizacin de la asistencia mdica;
Los servicios de orden econmico: transporte pblico, mercado y dems negocios, as como la instalacin de lavaderos comunes;
Los servicios de orden social: crculos sociales, escuelas, instalaciones destinadas a las actividades
recreativas e instituciones religiosas1
entonces habremos de ubicar los gneros elegidos de entre ellos; los aspectos relativos al agua
potable, transporte, mercados y dems fueron abordados en el captulo dos, as como la condicin esencial de todo equipamiento colectivo, que se liga no slo a la representacin del hombre
sino tambin al hombre en la ciudad dentro del movimiento de urbanizacin.
En este captulo se privilegiaron los equipamientos colectivos de salud comprendida dentro
de los servicios de orden sanitario y los de educacin y religin dentro de los de orden social.
Como productos de una colectividad se analizan tanto las obras producidas por el Estado como
por la iniciativa privada; toda vez que todas ellas contribuyeron al desarrollo cultural de un grupo
y de la ciudad. Por otro lado, la seleccin de estos gneros tambin obedeci a que en stos fue
posible encontrar la informacin que permiti el anlisis del desarrollo evolutivo para establecer
los motivos de su gnesis, el discurso, sus lenguajes y esquemas compositivos.
1
Franois Fourquet y Lion Murard, Los equipamientos del poder, ciudades, territorios y equipamientos colectivos,
Editorial Gustavo Gili, Barcelona, 1978, p. 125.
273
El anlisis que se realiz a cada uno de ellos pretendi, por un lado, poner de manifiesto de
modo detallado los procesos de introduccin, su evolucin, sus caractersticas, promotores y
constructores, y por otro, un anlisis especficamente en lo concerniente a la construccin y uso
del discurso y del poder en las instituciones, esto se realiz de modo diferente en cada uno de los
gneros seleccionados y la profundidad o el detalle obedeci principalmente a la disponibilidad
del material obtenido para el estudio.
El anlisis en lo concerniente a la construccin y uso del discurso y del poder en las instituciones
se realiz desde el marco terico de Michael Foucault, especficamente. El hecho es que a travs
del discurso emitido por los promotores Estado e iniciativa privada se ejercieron su poder
institucional y generaron verdad de las cosas. Como seal Foucault, la produccin de discursos se autoconstituyen en verdades incuestionables. El discurso, por ello, pasa a ser en realidad
una forma especfica de poder. De esta manera, analizar las premisas contenidas en el discurso
dio pie a encontrar el trasfondo, sin olvidar lo explcito: el discurso manifiesto no sera a fin de
cuentas ms que la presencia represiva de lo que no se dice, y ese no dicho sera un vaciado
que mina desde el interior todo lo que se dice.2
El mismo autor agrega en relacin del discurso:
es un conjunto de reglas annimas, histricas, siempre determinadas y el espacio que se han definido
en una poca dada y para un rea social, econmica, geogrfica o lingstica dada () no forma una
unidad terica o formal, indefinidamente repetible y cuya aparicin o utilizacin en la historia podra
sealarse () entendido as (el discurso) no es una formacin ideal ni intemporal () (es) fragmento de
historia, unidad y discontinuidad.3
En relacin al poder, se consider fundamentalmente como lo plantea Foucault, que no es necesariamente poseer una funcin opresora y negativa, sino aquel que es creador de conocimientos
y realidades, por lo que el poder estar vinculado al saber, ms all de la necesidad del poder
Michel Foucault, La arqueologa del saber, 11. Ed., Siglo XXI Editores, Ciudad de Mxico, 1985, p. 40.
Michel Foucault, La arqueologa, p. 40.
274
por tener este o aquel descubrimiento, o forma de saber, sino que ejercer el poder posibilita crear
objetos de saber, los hace surgir, hace acopio de informaciones y las utiliza.4
Michel Foucault, Microfsica del poder, Ediciones La Piqueta, Madrid, 1992, p. 99.
Michel Foucault, La arqueologa del saber, 11. Ed., Siglo XXI, Ciudad de Mxico, 1985, pp. 14 y 15.
275
del ao de 1919 despus del movimiento armado de la Revolucin Mexicana, que fue cuando
en Mrida se construy el Sanatorio Rendn Peniche, destinado a los ferrocarrileros (la empresa
del ferrocarril tuvo en esos aos gran auge en Yucatn, indudablemente vinculado a la industria
del henequn), este sanatorio fue el primer edificio posrevolucionario neomaya; de la dcada de
los cuarenta se eligieron el Hospital de Nio y el Centro Anticanceroso, seleccionados por ser el
primero pionero en su tipo en el pas, y el segundo por representar una manifestacin ms de la
modernidad de la posrevolucin en estilo art-dco. De la dcada de los cincuenta se eligieron
dos casos: el Hospital para Ejidatarios Henequeneros 20 de Noviembre, que dio servicio (como
su nombre lo dice) a todos los ejidatarios de la industria del henequn, obra de gran envergadura
y que no se haba tenido en Yucatn desde los hospitales de principios de siglo; el segundo fue el
Instituto Neuropsiquitrico y su eleccin obedeci a que ste apareci como un complemento al
viejo hospital de dementes de principios de siglo, en el cual se pusieron en prctica las nuevas
teoras clnicas para el tratamiento de los enfermos mentales.
La dcada de los sesenta se caracteriz por la aparicin en Yucatn de dos fenmenos, por un
lado la construccin de la primera clnica ciento por ciento privada, con un diseo ex profeso
y la aparicin de clnicas y unidades de salud con modelos institucionales (1958); la Secretara
de Salud construy en Mrida su primera Unidad en el centro de la ciudad, sin embargo, sta se
realiz con un diseo local; en 1962 se inaugur el complejo hospitalario de la T-1 del Instituto
Mexicano del Seguro Social y otras clnicas correspondientes al sector salud de la Secretara de
Salubridad, de esta ltima se eligi la maternidad construida en el puerto de Progreso, y de la
iniciativa privada: la Clnica de Mrida, en Yucatn existan clnicas privadas pero ninguna con el
tamao y los servicios que sta en su momento proporcion. Finalmente, se seleccion el Hospital Regional de ISSSTE ya que con l se introdujo una tipologa hospitalaria nueva.
4.1.1 Los hospitales al inicio del siglo XX, antecedentes al perodo de estudio
Con el gobierno de Porfirio Daz se logr la paz soada y el Estado se dio a la tarea de consolidar
y legitimar su poder de fondo y forma; transform a la capital del pas con el fin de presentarla
276
como el centro de Gobierno y autoridad civil de gente prspera y civilizada, por lo que convirti
a la ciudad sucia y con problemas de sanidad, en una moderna, higinica y monumental capital,
con la ereccin de monumentales edificios a los que se les llamara palacios por ser aquella la
imperial metrpoli de un gobierno legtimo y civilizado.
Los mitos polticos de la modernidad, el progreso, el orden y la legitimidad, estaban presentes en el imaginario colectivo del grupo en el poder; as, los edificios se convirtieron en
ideas-imgenes6 mediante los cuales se inculcaron los valores antes mencionados y desde
luego permitieron al Estado legitimar su poder; as mismo, estas imgenes de poder estaban
acompaadas de verdad, a decir de Foucault, inmersa en el discurso poltico. El rgimen de
Porfirio Daz eligi las formas afrancesadas, neoclsicas y eclcticas, como smbolo de cultura
y modernidad.
En correspondencia con ese momento se ubicaron los antecedentes a la modernizacin de los
servicios hospitalarios en Yucatn y particularmente en Mrida que, en los inicios del siglo XX
se construyeron especialmente para este fin, dado que anteriormente a esa fecha los hospitales
con que contaba la ciudad haban sido adaptados en edificios ya existentes. El Hospital OHorn
y el Asilo Leandro Len Ayala, con proyectos arquitectnicos diseados especialmente para su
uso, fueron proyectados por el ingeniero Salvador Echegaray basndose en el programa arquitectnico formulado por el doctor Luis F. Urcelay, y fueron construidos por los ingenieros Salvador
Echegaray7 y Jess Padilla, respectivamente.
El diseo que presentaron ambos hospitales correspondi a la tipologa arquitectnica conocida
como pabellonal, disposicin que surgi a partir de las ideas de Louis Pasteur, quien entre 1848
y 1865 demostr la importancia de la antisepsia, que significa el combatir los grmenes, y de la
6
Celia Berktein Kanarek, La concepcin simblica del poder: el Palacio Legislativo Federal porfiriano, en Historia
y Grafa, Nm. 22, Universidad Iberoamericana, Ciudad de Mxico, 2004, p. 79 y 80.
7
Ambas obras son concursadas y ganadas por el ingeniero militar Salvador Echegaray; otras obras de l, en coautora con el arquitecto Ernesto Lattine, fueron los edificios del Faro Carranza, Telgrafos y Correos y la Aduana Martima, en estilo neoclsico, para el puerto de Veracruz. En el ao de 1912 el ingeniero Salvador Echegaray fue director
general de Estadstica.
277
asepsia, para impedir su llegada, y propugn por la esterilizacin del medio ambiente, introduciendo reglas de higiene.
En funcin de esto, se sustituyeron en 1864 los grandes edificios monumentales, los hospitales
palacios, de tipologa claustral, desarrollados durante los siglos XVII y XVIII, por conjuntos de
edificios destinados cada uno a una enfermedad, dejando entre ellos un espacio libre que permita la aireacin para evitar el contagio entre los pacientes de las distintas patologas.8
La corriente de pensamiento que condujo a estas innovaciones fue el higienismo, desarrollada a
finales del siglo XVIII, y se bas en la creencia de que el desarrollo de las enfermedades dependa
del entorno ambiental y del medio social. Responda al higienismo la teora miasmtica, la cual
planteaba que a travs de los vapores o efluvios voltiles dispersados por el viento se provocaban
varios tipos de morbidez.
A finales del siglo XIX se dio un cambio de paradigmas ante la aparicin de la revolucin bacteriolgica, que sustituy a la medicina tradicional que crea en miasmas y en cuarentenas y fumigaciones. Esta revolucin bacteriolgica consista en la bsqueda de microbios y el combate de
ellos a travs de vacunas. En funcin de estos conceptos, a finales del siglo XIX se transformaron
las instituciones higinicas, bajo la direccin de los bacterilogos. Los descubrimientos de Louis
Pasteur y Joseph Lister hicieron ver la importancia de la aireacin de los espacios, al conocerse
que eran microbios y no aires malsanos los que transmitan las enfermedades. El funcionamiento
en el diseo hospitalario permaneci ante la teora higienista y microbiana.
Los aspectos tcnicos fueron determinantes para el desarrollo de la arquitectura hospitalaria de
esa poca ya que se introdujo: a) Ventilacin natural que posibilitaba la salida de los miasmas; se
plante la cubierta con una bveda apuntada que permita que el aire viciado y caliente subiera
de manera natural hacia lo alto, sin quedarse en ngulos de la construccin, de acuerdo con los
estudios del ingeniero Casimir Tollet. Para la ventilacin se planteaban tubos de 30 centmetros
de dimetro, ubicados a cierta distancia sobre el techo y se disponan entradas de aire fresco en
8
Nikolaus Pevsner, Historia de las tipologas arquitectnicas, Gustavo Gili, Barcelona, 1979, pp. 185 y 186.
278
las paredes laterales de la bveda. b) La divisin de las salas de enfermos en: hombres-mujeres,
infecciosos-no infecciosos, medicina-ciruga. En los servicios de maternidad la divisin fue: mujeres en trabajo de parto y mujeres que ya haban parido, infectadas y no infectadas. c) Una
zonificacin de actividades ubicando los servicios generales en un mismo edificio; la consulta
externa de medicina y de ciruga, de tal manera que se pudiera continuar con los cuidados en
la casa. d) La introduccin de progresos tecnolgicos, como el acceso a la red de alcantarillado,
agua, alumbrado elctrico, entre otras. As pues, la segmentacin y ventilacin de los edificios
constituyeron los dos grandes principios higienistas aplicados a la arquitectura hospitalaria de
finales del siglo XIX.
Estas ideas llegaron a Yucatn en 1887 a travs del doctor Saturnino Guzmn Cervera, quien
despus de haber realizado sus estudios de medicina en la escuela local, se fue a estudiar a la
ciudad de Pars, en donde obtuvo su ttulo, adems de asistir a las clnicas de cirujanos famosos en las ciudades de Berln y Viena, trayendo consigo las novedades de Pasteur y Lister, la
asepsia y la antisepsia, y los atrevimientos de la ciruga.9 l manifest: Tuve la suerte () de
estar en Pars cuando la ciruga estaba naciendo, en esa poca en que el mdico ingls Lord
Lister, aplicando las teoras del gran sabio francs Louis Pasteur, hizo el milagro de llevar la
ciruga hasta alturas no sospechadas hasta entonces10 por lo que cuando en los albores del
siglo XX se plante durante el perodo gubernamental del licenciado Olegario Molina Sols la
construccin de nuevos hospitales acordes con la nuevas teoras, estas consideraciones fueron
tomadas en cuenta.11
Alejandro Cervera Andrade, Apuntes para la historia del Hospital OHorn de la ciudad de Mrida, Yucatn,
Mxico, en Revista Biomdicas, Vol. 12, Nm. 1, enero-marzo, Mrida, Mxico, 2001. pp. 66 y 67.
10
Alejandro, Cervera Andrade, Apuntes para, p.67.
11
Acorde a las nuevas teoras de la asepsia y la antisepsia se dot al Hospital OHorn, trados de Pars, modernos
autoclaves, para la esterilizacin de gasas, campos operatorios y la ropa de los cirujanos as como de instrumental
moderno, aunado a esto se trajo a un mdico competente para la enseanza de la Bacteriologa, Anatoma Patologa y Qumica Clnica. Para ampliar el tema ver Alejandro, Cervera Andrade, Apuntes para la historia del Hospital
OHorn de la ciudad de Mrida, Yucatn, Mxico, en Revista Biomdicas, Vol. 12, Nm. 1, enero-marzo, Mrida,
Yucatn, 2001. pp. 66-74.
279
Fig. 1 Vista area del Hospital OHorn. Imagen tomada de Yucatn, Recuerdo
de la primera visita del Sr.
Presidente de la Repblica
Mexicana, General Don
Porfirio Daz, 1906.
En el eje principal, en la fachada, se ubic la administracin, que contena las oficinas, consulta
externa, farmacia y habitaciones del administrador, entre otras. Los servicios generales ocupaban
otros edificios destinados a cocina, lavandera, baos y mortuorio. En cada departamento exista
una direccin, sala de operaciones y pabelln para enfermos, ligados entre s por galeras cubiertas. Esos pabellones se componan de una sala con techo en forma de ojiva, con cupo para
veinte camas, dos cuartos de distincin, comedor, cuartos para agonizantes, sanitarios y ropera.
Respecto del sistema constructivo que se emple, fue de mampostera con techos dobles de concreto armado, dejando un espacio libre entre ellos. La iluminacin de las salas de forma bilateral
y la ventilacin se podan graduar por medio de ventanillas colocadas debajo de las ventanas y
mediante puertas con antepechos movibles.
280
El esquema tipolgico del conjunto se desarroll a base de pabellones aislados, comunicados entre
s por una galera techada; dichos pabellones eran dominados visualmente desde el extremo de ellos,
de tal modo que a travs de la avenida principal se tena un dominio de cada una de las reas. Fig. 2.
La disposicin al interior de cada uno de ellos permita el control de acceso y salida, al ubicar los servicios al principio y al final de los pasillos; el diseo de los mismos corresponda a las innovaciones
promulgadas por los higienistas y las teoras de Pasteur y Lister. A pesar de que en los pabellones se
emplearon dispositivos para que el aire pudiera fluir a travs de ellos, se present una inconsistencia
al ubicar las partes angostas de los pabellones hacia las orientaciones ms favorables.
La fachada principal, con un lenguaje neoclsico, compuesta de dos cuerpos articulados por otro,
presentaba en el frente un prtico con un frontn con pilares dricos y dos ventanas.12 La lectura
de la fisonoma de este edificio es de bienvenida, los cuerpos laterales se conforman como dos
brazos que se abren para invitar a entrar y la presencia de un prtico denota el gesto. Fig. 3
12
Jorge Garca Preciat, Historia de la Arquitectura, en Enciclopedia Yucatanense, edicin oficial del Gobierno de
Yucatn, t. IV, Ciudad de Mxico, 1977, pp. 435 y 436.
281
Respecto del discurso, en el ao de 1906, con motivo de la visita del presidente Porfirio Daz a
Yucatn, se inauguraron los hospitales OHorn y Ayala, con tal motivo se editaron lbumes conmemorativos patrocinados por el gobierno y por los empresarios; del lbum conmemorativo de
las fiestas presidenciales13 se extrae: las grandes colectividades humanas, conscientes () de
su crecimiento cultural, de sus deberes para con el prjimo, avanzan por la senda del progreso,
() as se ve cmo en las naciones cultas (), instituciones benficas ofrecen los () recursos
de la ciencia y de la caridad a esa msera porcin de la humana progenie14
Se pudo encontrar, a decir de Michel Foucault, la intencin del sujeto parlante; se puso de manifiesto la preocupacin del Estado por el pueblo; las obras de beneficencia se planteaban como
vitales para el desarrollo de esa sociedad que viva en el progreso, como una nacin culta, y desde luego, incorporando el lado bondadoso del Estado, que mezclaba la caridad con la ciencia.
El discurso fue evidente en la bsqueda de la legitimacin y de un imaginario que estaba en el
grupo en el poder, como proporcionadores de cultura a travs de las obras de beneficencia para
las clases menos favorecidas, cultura proporcionada a travs del saber de los mdicos.
Reminiscencia histrica ilustrada de las fiestas presidenciales en la ciudad de Mrida, Yucatn, febrero de 1906,
editado por C. Vega Schiafino, Ciudad de Mxico, 1906, p. 106.
14
Idem.
282
El conjunto se dividi en dos secciones: una destinada para hombres y otra para mujeres, con
servicios generales de administracin, cocina, talleres y lavandera, ubicados en el eje del conjunto. Fig. 4 y 5
Cada departamento constituy una unidad completa, con pabellones aislados para observacin,
comedor, escuela, enfermera y baos, adems de los destinados a la atencin de los enfermos
tranquilos, agitados, furiosos y epilpticos.
283
El pabelln central, de dos pisos, con frente a la plaza y a la avenida, de estilo neoclsico,15 aloj
la fachada principal. Se resolvi en un gran paraleleppedo con pilastras adosadas y elementos
eclcticos acadmicos, formas portadoras de un significado de Estado poderoso, dador de beneficios sociales, con una imagen fuerte y slida, en congruencia con el mensaje que se quera
enviar como sede de una institucin de enfermos mentales.
En ambos hospitales se pudieron encontrar muchos rastros de una intencin clara de modernizacin y de poder, al determinar los esquemas de funcionamiento y las formas arquitectnicas, de
acuerdo con el nuevo saber mdico. A la vez, el Estado buscaba legitimarse utilizando este poder
a travs de la materializacin de estos saberes.
Estas grandes iniciativas se acabaron con la lucha armada de la Revolucin Mexicana y algunos
aos de inestabilidad poltica, lo que fren el desarrollo, pero pasado ese perodo se dio una
reactivacin econmica en la cual se manifest una diversidad arquitectnica. As, convivieron
varios lenguajes, como el neocolonial, el neoindgena, el art-dco y el llamado moderno internacional, que, al igual que en el perodo anterior, utilizaron como medio las imgenes para
transmitir la ideologa que los gobiernos queran. El neocolonial y el neomaya para Yucatn
fueron los encargados de preservar la cultura y los valores mexicanos, con el fin de expresar
un nacionalismo y una identidad propia, en contrapartida con las influencias extranjeras. Del
modelo internacional se pens que con esto se proyectaba una idea de modernidad, y con ella
la esperanza de un nuevo futuro.
Jorge Garca Preciat, Historia de la Arquitectura, en Enciclopedia Yucatanense, edicin oficial del gobierno de
Yucatn, t. IV, Ciudad de Mxico, 1977, pp. 439 y 440.
284
con tres edificios aislados: ciruga, pabelln para convalecientes y administracin; en los dos
primeros se emplearon elementos de tendencia clasicista con neocolonial; edificio distintivo del
conjunto lo era la portada, dispuesta en un chafln, con escudos y otros elementos de tendencias
similares a la de los otros edificios. Con las ampliaciones que se realizaron en la dcada de los
veinte se confirm el esquema de pabellones aislados.
16
El arquitecto Manuel Ambilis Domnguez fue uno de los exponentes del neoindigenismo en Mxico; fue autor del
Pabelln para la Exposicin Mundial de Sevilla en los aos veinte; en Mrida, del parque de las Amricas y del Monumento a la Patria, entre otras obras. Para ampliar el tema, consultar Enrique Urzaiz, Arquitectura en trnsito, op. cit.
285
286
287
arquitectura siempre fueron sobrios y escuetos, sin ceder al decorativismo, a la libertad plstica
o al larde tecnolgico.20
A Yucatn esas ideas y planteamientos no llegaron en esas dcadas; as, los cuarenta se caracterizaron por la introduccin de nuevos servicios hospitalarios promovidos por el Estado, o bien,
por la iniciativa privada, con apoyo del mismo; fueron cuatro los hospitales construidos en esa
dcada, el ms importante, el Hospital de Ejidatarios Henequeneros 20 de Noviembre, para el
servicio de los trabajadores de la fibra de henequn, los otros tres, de especialidades, surgieron
de acuerdo con las nuevas teoras mdicas; la Maternidad de la Cruz Roja, institucin que se haba instaurado en el Estado el ao anterior, en 1939; el Hospital del Nio, primero en su gnero
en el pas, y el Centro Anticanceroso.
288
acontecimiento, dado que para esta dcada Yucatn viva un perodo de gran auge por los ingresos obtenidos de la venta de la fibra del henequn. Fig. 8 y 9
Este hospital se instal en una quinta de la calle 35 que fue acondicionada y ampliada, segn los
lineamientos dictados por el ingeniero Canto Echeverra y los mdicos Francisco Colom Trujillo
siendo ste su primer director y Jos Lavalle Peniche, La construccin estuvo a cargo del
Departamento de Comunicaciones y Obras Pblicas. Tena capacidad para 60 camas y seccin
de consulta externa, donde se atenda diariamente a 100 infantes; contaba con un grupo de pediatras y diversos especialistas.
El discurso en torno de este hospital se encontr en una publicacin expedita para el Hospital
del Nio, editada por el Gobierno del Estado, en el ao de 1940. En su introduccin se justific
su construccin, haciendo referencia al
movimiento internacional en favor del nio, organizado con miras al mejoramiento de la humanidad
() que en el planeamiento de los mltiples problemas que afectan al hombre, se han enfocado ()
289
todas las investigaciones sociolgicas y cientficas, hacia la infancia, a cuyo torno deben de acudir
todas las capas sociales, con la conciencia de que en la atencin que se preste al nio, estriba el grado
de evolucin y bienestar de cada pas.23
Y seguidamente se apunt que cierta dirigente de la Oficina del Nio de los Estados Unidos
llam al mejoramiento infantil una prueba de democracia; as de vinculado se encontraba a
la vida nacional.24 Fue esta una manifestacin ms de la influencia de Estados Unidos en todos
los aspectos de la vida de Mxico, y en Yucatn especficamente. As mismo, se plante que el
hospital estara dotado de todos los implementos necesarios y completamente modernos,
montados al igual que las ms adelantadas instituciones similares, y funcionando de acuerdo
con teoras cientficas comprobadas satisfactoriamente en otros pases.25 La finalidad de la nueva institucin sera: la curacin de los nios en la consulta externa o en los servicios internos; la
educacin puericultural de las madres; la creacin de una ctedra de enfermeras especialistas y
la enseanza de la pediatra a los estudiantes de la Escuela de Medicina.
En la descripcin de las reas del hospital, el doctor Jos Lavalle Peniche hizo referencia a las
asesoras recibidas por parte del pediatra yucateco doctor lvaro Carrillo Gil radicado en la ciudad de Mxico y a los doctores Agustn Castellanos y Gonzlez y Roberto Valdez Daz quienes
trabajaron en el Hospital Municipal de Infancia de La Habana, y fueron los asesores en la organizacin y proyecto del hospital.26
En virtud de carecer de los planos pues el edificio fue demolido, se cita la descripcin que el
director hizo del rea de servicio de medicina:
Ocupa una bien ventilada y acondicionada sala, situada en la parte baja del edificio principal; es de
forma cuadrilonga; tiene su dimensin mxima de oriente a poniente y la mnima de norte a sur. ()
comunica con el pasillo () a las salas de infectados y () servicios sanitarios () higinicos, dotados
23
Hospital del Nio, Ediciones del Gobierno del Estado de Yucatn, Mrida Yucatn, 1940, p. 9.
Idem.
25
Ibid., p. 11.
26
Ibid., p. 49.
24
290
de agua fra y caliente. La aireacin y ventilacin se hace por unos grandes ventanales de cristal, situados especialmente en la pared norte de la sala.27
En la descripcin que se hace del Servicio de Farmacia y Diettica se seal que contaba con
todos los elementos modernos para satisfacer las exigencias de la higiene: moderno autoclave
elctrico, esterilizador para agua y estufa de calefaccin igualmente elctrica, etc.28
En este edificio la lectura de los aspectos formales no fue trascendente dado que se utiliz un
edificio ya existente; las formas se haban adoptado y probado como portadoras de cultura y
progreso, sin embargo, exista en el conjunto un corredor que conectaba a dos zonas en donde
fue evidente el desapego a las formas eclcticas y se introdujo una nueva fisonoma propia de
la arquitectura moderna: utiliz bvedas de concreto armado con columnas esbeltas de concreto, haciendo gala de la tcnica al volar una parte de la misma. En Yucatn el uso del concreto
armado data de principios del siglo, sin embargo, la forma, su esbeltez y el alarde estructural
denotaban claramente un signo de modernizacin.
La tipologa empleada fue de tipo claustral, como consecuencia de la utilizacin de una casona
Porfiriana; no se apreci alguna innovacin importante, a pesar del discurso tan claro en cuanto
a los adelantos mdicos y de bienestar social que debieron de materializarse en el edificio, pero
en este caso no ocurri.
27
28
291
En el discurso que ley el director del nuevo centro dijo: est dotado de los elementos ms
modernos y eficientes que nuestras capacidades econmicas han permitido con ansia de aliviar las miserias humanas29
El diseo formal del Centro fue en un dco sencillo, con una tendencia manifiesta a la modernidad funcionalista en cuanto a su horizontalidad; la tipologa elegida fue la de patio interior,
que si bien es cierto permite cierta aireacin hacia los pabellones de camas, no constituy un
elemento de control hacia ellos, sta se dio a travs de pasillos. El esquema fue pobre y con excepcin del cuerpo que da a la fachada tanto el funcionamiento como los aspectos ambientales
no fueron resueltos.
El discurso fue limitado pero claro: era a travs de la modernidad y la eficiencia que se lograra
mitigar las penas humanas. Fig. 10 y 11
29
292
final del corredor central entre las camas. El lenguaje formal que present correspondi al neocolonial, en coincidencia con las preferencias de este autor, quien realiz numerosas obras en este
estilo. Fig. 12 y 13
Fig. 12. Axonomtrico del
Hospital de Ejidatarios
Henequeneros. Tomada del
archivo vertical de la Hemeroteca Jos Pino Surez
del Estado de Yucatn.
Por lo anterior podemos concluir que los procesos de introduccin de los servicios de salud en
la dcada de los cuarenta, estuvieron ntimamente relacionados con las polticas del Estado y sus
instituciones, dador de bienestar social a travs de las obras de servicios hospitalarios, en una
dcada en la que se vivi un gran auge econmico como resultado de la venta de la fibra del henequn. Los profesionistas locales fueron los agentes modernizadores, pero slo se manifestaron
en los estilos del nacionalismo y de la modernidad del art-dco.
294
30
No se realiz el anlisis particular porque no fue posible encontrar informacin, plantas o fotografas.
295
gubernamental del seor Jos Gonzlez Beytia e inaugurada el 31 de enero de 1954 por el gobernador interino Vctor Mena Palomo.
El edificio fue costeado en su totalidad por la iniciativa privada, con la cooperacin de los industriales cordeleros del estado, en los terrenos donados por el gobierno del estado; constaba
de tres departamentos para consulta externa, cmara Gesell, sala de conferencias, dos salas con
camas para pacientes, dos cuartos privados, unidad quirrgica con el equipo especial necesario,
adems de los dems servicios.
El Instituto fue proyectado por el ingeniero Mario Duarte Carrillo, previa planificacin de la disposicin del mismo, por su director el doctor Ral Crdenas Torre; el trabajo le fue encargado al
ingeniero Mario Duarte Carrillo directamente por el gobernador del estado, seor Jos Gonzlez
Beytia.31 El diseo obedeci a las necesidades neuroquirrgicas de una poblacin de un milln
de habitantes, previendo un crecimiento si as se requiriera. Fig. 14 y 15
31
Elvia Mara Gonzlez Canto, entrevista realizada al Ing. Mario Duarte Carrillo, autor de la obra, el 7 julio de 2008.
296
El discurso en torno del mismo era en el tenor de contar con el primer centro cientfico en su
gnero en todo el pas y magnfica obra que, segn autorizadas opiniones, constitua un timbre
de orgullo para la ciencia mdica yucateca; de este modo se present a la sociedad en la prensa.
En el acto inaugural el doctor Ramrez Corra prcer de la neurociruga en Cuba dijo la
ereccin del Instituto Neuropsiquitrico es una victoria para la cultura yucateca.32
As mismo expuso: Que un hospital no slo beneficia al medio por sus fines caritativos, sino
ms an como una entidad de cultura, que lleva implcitamente el progreso del lugar donde se
erige () como centro progresista y conquista cultural, que dignifica a cualquier sociedad.33
El poder del discurso del Estado en relacin con la calidad de los servicios ofrecidos y la idea
de beneficio cientfico, modernidad y tcnica avanzada, fue la manera de obtener legitimacin
entre la sociedad.
El lenguaje formal utilizado en la fachada correspondi al art-dco, la decisin al respecto fue
del ingeniero Mario Duarte, quien dise y construy la obra;34 hay que sealar que en Yucatn el art-dco tuvo mucho xito, sobre todo en la vivienda popular y en los edificios pblicos;
de la misma poca tarda es la Escuela de Medicina de la UADY (1952), ubicada en la misma
zona. De tal modo que las formas utilizadas no fueron decisin expresa del Estado sino de
la moda del momento y el gusto del ingeniero. En este caso se materializ el saber mdico y
las aspiraciones del proyectista, no la ideologa poltica. La tipologa empleada correspondi
al tipo claustral y a pesar de que no favoreci a la ventilacin por encontrarse alineado el
edificio a la calle, s en cambio proporcionaba un control total de todas las reas a travs del
patio del claustro.
Hay que distinguir que los arquitectos que realizaron todos los proyectos antes del advenimiento
del Centro de Salud fueron constructores y profesionistas locales, a diferencia de lo que ocurri
32
297
con el Centro de Salud, que se construy con un proyecto elaborado en la ciudad de Mxico en
el Departamento de Proyectos de la institucin.
Con el proyecto del Centro de Salud se introdujo un nuevo lenguaje, propio de las formas del
movimiento moderno, el volumen suspendido, la horizontalidad de los vanos y del volumen
fueron algunos de los nuevos elementos del cdigo formal que este edificio present; las otras
clnicas y hospitales se construyeron con lenguajes que an evocaban a los nacionalismos, al
dco y en algunos de los casos presentaron un incipiente protorracionalismo, o bien propuestas
carentes de alguna cualidad arquitectnica.
La proliferacin de servicios para la salud en el centro de la ciudad, se sum a la destruccin de
la estructura de la ciudad colonial y porfiriana iniciada en la dcada anterior; si bien se sustituyeron algunos casos con ejemplos que hoy se puede decir que caracterizaron una poca, tambin
por muchos que slo contribuyeron a la destruccin del tejido histrico y al empobrecimiento
del espacio urbano.
298
37
299
la primera parte de la red hospitalaria nacional del ISSSTE, que cubra las zonas norte, noreste,
costa del Golfo y pennsula de Yucatn, siendo en su totalidad ocho hospitales. El proyecto fue
elaborado por el arquitecto Ren Martnez Ostos, director del Departamento de Arquitectura y
Planeacin del propio Instituto, la construccin de la obras la ejecutaron el ingeniero civil Ramn Lpez Peraza y el arquitecto Enrique Rincn Edgerton. ste contaba con 44 camas, distribuidas en cuartos para una o dos personas, 19 mdicos familiares, 14 de diversas especialidades,
3 residentes y 2 odontlogos. El discurso en la prensa fue escueto y slo se mencionaba que se
consideraba uno de los mejores del pas y como un nosocomio moderno.
La forma del edificio, que an existe, es un paraleleppedo con un volumen de circulaciones
adosado al frente; sin duda alguna era un edificio que por sus grandes superficies acristaladas
trasmita la modernidad, si embargo, stas fueron orientadas norte-sur, siendo esta ltima de gran
incidencia solar, por lo que fue evidente que la imagen institucional los otros construidos en el
pas eran muy similares prevaleci ms que las condiciones particulares del sitio. La tipologa
empleada es de bloque; un gran paraleleppedo contenedor de todas las actividades en diferentes
pisos y con acceso a ellos a travs de un elemento vertical de circulacin. En esa dcada y especialmente en la ciudad de Mxico era una tipologa comn, porque optimizaba el terreno y permita una circulacin gil entre las distintas zonas del hospital; en Yucatn no se tenan problemas
de terreno, pero con toda seguridad lo que norm el proyecto fueron los lineamientos establecidos
en la dependencia. Este hospital se convirti en el pionero en su tipologa arquitectnica. Fig. 16
300
38
301
Los departamentos contaron con aire acondicionado y una iluminacin especial. La central de
enfermera se dot de un sistema especial de llamados. Al sonar el timbre se encenda la seccin
que corresponde al cuarto en que se hizo la llamada. Los cuartos contaban con camas confortables, burs, sillas, arbotantes para sueros, etctera.
La construccin estuvo a cargo de la Comisin Constructora de Salubridad, por conducto del
arquitecto Luis Coq y con la intervencin del arquitecto Jorge Hernndez de Anda. El residente
de la obra fue el arquitecto Carlos Castillo Zavala.
En la obra se utiliz por primera vez en este puerto cermica trada de Monterrey, de la cual la
prensa rese: En la construccin del edificio se utiliz material adquirido en Mxico como
azulejos modernistas que le dan un aspecto agradable y sugestivo a la obra () El nuevo edificio
luce muy atractivo, especialmente en el frente, con su fachada de azulejos.39
En este discurso se observ un cambio, ya no se presentaba el Estado como el protagonista, dador
de bienestar y cultura, sino lo destacable fueron las innovaciones tecnolgicas y la utilizacin
de nuevos materiales, que la distinguieron de las otras arquitecturas particularmente por su condicin indita en el sitio, en relacin con la utilizacin de azulejos en fachadas, hecho que se
present como un gesto de modernismo y que le dio un aspecto agradable a la misma, pero que
en realidad fue por una condicin higinica.
El lenguaje utilizado correspondi a las formas institucionales del momento, la horizontalidad, la
ligereza de los elementos, las transparencias; la utilizacin de las celosas y los elementos estructurales ligeros evidenciaban la introduccin manifiesta del lenguaje del movimiento moderno,
que al puerto de Progreso ya haba ingresado desde finales de la dcada de los cuarenta con la
construccin de varias escuelas funcionalistas, resultado de los planes de educacin. Ms que
una innovacin para el sitio fue la adaptacin de una imagen institucional.
39
302
La tipologa empleada fue lineal y correspondi a los esquemas que para esa poca ya se haban
generalizado en otras regiones del pas introducidas por las dependencias del sector salud. El
esquema permita un dominio de las reas a travs del pasillo central del pabelln de las camas
y la ubicacin de la central de enfermeras que permita el rpido acceso a los cuartos.
En cuanto a las soluciones ambientales se dio una congruencia al ubicar los dos cuerpos hacia
las orientaciones ms favorables, as como la introduccin de un juego de diferentes alturas en
los techos para sacar e introducir aire y obtener iluminacin natural del norte.
40
El arquitecto Fernando Garca Ponce hizo sus estudios en la UNAM y en el ltimo ao de la carrera los abandon
para dedicarse a la pintura; form parte de la generacin llamada de la ruptura.
303
El lenguaje formal utilizado correspondi en su totalidad a las formas del movimiento moderno,
su arquitectura moderna se evidenciaba en todos sus aspectos, tanto formales, funcionales, expresivos, tcnicos y ambientales.
El discurso que de esta obra se dijo, se puede sintetizar en lo siguiente:
La belleza de su sencillez est lograda por la sntesis de sus elementos formales, que se concretan a expresar sus volmenes ntidamente depurados, (). Formas plsticas () sin las falsedades de la escenografa
arquitectnica, (). Se desenvuelve con claro sentido funcional en sus plantas y circulacin interior. La
lisura de sus planos frontales se interrumpe con muros de vidrios o celosa, que le dan variedad y gracia
a sus claroscuros que filtran la molesta luz del poniente. () Sus cuerpos, sencillos y geomtricos se extienden con flexible continuidad espacial. Los elementos constructivos quedan supeditados a las formas
arquitectnicas, que es condicin del racionalismo. El paisaje no se esfuma ni se detiene a la entrada,
sino llega a su interior y encuentra un lugar propicio para hacer acogedora y pintoresca la prolongacin
de la naturaleza circundante, que tanto influye en el espritu y la psicologa de sus habitantes41
El discurso en esta ocasin no fue por parte de los promotores, sino de uno de los crticos de
arquitectura y del urbanismo ms importantes en Yucatn, y adems, promotor de la arquitectura
moderna: el arquitecto Leopoldo Tommasi Lpez.42 En ste se encontraron aspectos relacionados
con los nuevos cdigos arquitectnicos emanados del movimiento moderno y su congruencia
con el tiempo y el lugar. Fig. 19 y 20
41
42
304
El anlisis de los lenguajes y los esquemas utilizados se pueden sintetizar en la tabla 1. A partir de la lectura se apreci que la tipologa arquitectnica de los esquemas compositivos tipo
claustral y pabellonal predomin hasta principios de la dcada de los cincuenta, en donde los
lenguajes empleados fueron el eclctico, neocolonial y el dco; fue a partir de la dcada de los
sesenta cuando se incorpor el esquema lineal que responda al funcionalismo, en congruencia
con el lenguaje moderno. Esta incorporacin se hizo de igual manera va el Estado y la iniciativa
privada. En la misma dcada se incorpor, con la clnica del ISSSTE, la tipologa de bloque con
un lenguaje moderno. Esta ltima tipologa no se dio en las obras de la iniciativa privada por la
escala de las mismas.
Ao
Autor
Tipologa arquitectnica
Lenguaje
Hospital OHorn
1906
Pabellonal
Eclctico
1906
Pabellonal
Eclctico
1919
Manuel Ambilis
Gregory Webb
Mixto
Pabellonal y Claustral
Neomaya
1940
Departamento de
Comunicaciones y Obras
Pblicas
Claustral
Eclctico
Centro Anticanceroso
de Mrida
1947
No se tiene
Claustral
Art-dco
1950
Mixto
Pabellonal y Claustral
Instituto Neuropsiquitrico
1954
Claustral
Art-dco
Maternidad en Progreso
1962
Comisin Constructora de
Salubridad Arq. Luis Coq y
Jorge Hernndez de Anda.
Lineal
Moderno
Clnica de Mrida
1964
Lineal
Moderno
1966
Bloque
Moderno
Neocolonial
Tabla armada por la autora de acuerdo con la informacin obtenida y del anlisis de la misma.
305
Por lo anterior, podemos concluir que los procesos de introduccin de los servicios de salud en
la dcada de los cuarenta fueron producto de las polticas del Estado y sus instituciones; como
consecuencia del auge econmico en el estado y resultado de la venta de la fibra del henequn.
Los agentes modernizadores fueron los profesionistas, quienes se manifestaron en los estilos del
nacionalismo y de la modernidad del dco.
La dcada de los cincuenta fue la de la modernizacin de los servicios; los agentes modernizadores fueron los profesionistas y constructores locales contratados por la iniciativa privada;
con su inclusin se dio inicio a la destruccin del tejido histrico, por la introduccin de otros
cdigos arquitectnicos.
El Estado incorpor a los servicios de salud una institucin federal, la Secretara de Salubridad y Asistencia, que introdujo un lenguaje y un esquema compositivo propio del movimiento moderno.
En la dcada de los sesenta se dio la incorporacin de esquemas y expresiones formales con cdigos arquitectnicos cargados de un simbolismo, ya probados en otros estados del pas y en las
dependencias de gobierno; los equipos de proyectistas de las dependencias federales fueron los
encargados de ejecutarlas, en la mayora de los casos adaptndose a las condiciones climticas
del lugar.
El discurso encontrado en todas las dcadas estudiadas mantiene la idea de progreso y de cultura; sin embargo, va a haber una variacin acorde al momento ideolgico; para principios de
siglo, en el discurso se manejaban los conceptos de cultura, nacin culta, progreso, ciencia,
benefactor; iniciado el perodo posrevolucionario, particularmente con el movimiento nacionalista, aparece de nuevo el concepto de cultura, pero enfocado especficamente a lo regional; en
la dcada de los cuarenta se sumaron a estos conceptos el de modernidad como una respuesta a
las exigencias de la higiene; en los sesenta aparecen en el discurso conceptos que tienen ver con
modernismos, ligados a los nuevos materiales de construccin e innovaciones tecnolgicas.
306
Fueron los mdicos poseedores del saber elementos definitorios en la arquitectura, cuyas formas
se convirtieron en expresiones de poder, generadas por ese saber. El Estado utiliz el saber de los
mdicos para llevar a cabo su misin social y la imagen que quera legitimar.
Las tipologas arquitectnicas generadas por el saber mdico, implantadas por las nuevas teoras
clnicas de principios del siglo XX, no presentaron grandes innovaciones sino hasta la dcada
de los sesenta con la introduccin de los esquemas lineales promovidos, por un lado, por las
instituciones del sector salud, que trajeron stos ya probados y desarrollados en la Ciudad de
Mxico, y por otro lado, por la iniciativa privada que introdujo los nuevos cdigos del movimiento moderno.
Las tipologas generadas a partir de los saberes mdicos cumplieron en menor o mayor grado con
las exigencias de control planteadas, dependiendo de las cualidades del proyectista.
Los lenguajes formales utilizados hasta la dcada de los cincuenta respondieron a la moda del
momento y a las preferencias del autor, en los inicios del siglo a las formas eclcticas acadmicas, posteriormente a las formas del nacionalismo, dco, necolonial y neomaya; y en la dcada
de los cincuenta a las formas de la arquitectura moderna institucionalizada, o bien como propuesta de su autor.
Los autores de los proyectos no tuvieron una identificacin con el Estado; los constructores que
disearon las obras lo hicieron porque ganaron un concurso, eran empleados de alguna dependencia de gobierno, o la obtuvieron por otro vnculo, por lo que el lenguaje formal de los edificios correspondi a las modas del momento o las preferencias del proyectista, con excepcin
del Sanatorio Rendn Peniche, que respondi a un proyecto de Estado.
307
43
Francisco Chanona Farrera, Tipologa escolar del porfirismo en Yucatn, tesis de Maestra, Facultad de Arquitectura de la Universidad Autnoma de Yucatn, Mrida, Mxico, 2000, p. 12.
44
Fernando Bautista Buenfil y Sonia Rodrguez Martnez, Las escuelas yucatecas durante el Porfiriato (18761911), 2 parte, en Revista de la Universidad Autnoma de Yucatn Nm. 196, Mrida, Mxico, 1996, p. 66.
45
Francisco Chanona Farrera, Tipologa escolar del porfirismo, pp. 114-116.
308
independientes de los salones; g) destinar 1.50 m por alumno y de 4.5 a 5 m de altura en los
salones, y h) contar en las escuelas con inodoros, mingitorios y caeras para agua.46
Durante el gobierno del licenciado Olegario Molina se dio un fuerte impulso a la construccin
de edificios destinados a la enseanza. En un mensaje que dio el 1 de enero de 1904 dijo:
siendo las condiciones de local tan importantes para adaptar a las labores de la Instruccin los
preceptos de la pedagoga moderna, el ejecutivo promueve en todas las poblaciones del estado la
construccin de Casas-escuelas que renan en lo posible los requisitos tcnicos aconsejables por los
modernos sistemas de enseanza.47
Al siguiente ao volvi a sealar la importancia de los edificios adecuados como una condicin
para la formacin de individuos preparados socialmente, as como los problemas detectados en
los existentes:
Una de las graves dificultades () ha sido la carencia de edificios apropiados para el buen xito de un
avanzado sistema de enseanza que exige, como punto de partida, las condiciones del local. Por eso
el Ejecutivo dirigi desde luego sus afanes a la construccin de casas-escuelas conforme los dictados
de la Pedagoga, procurando que el mayor nmero de ellas reuniesen las condiciones de hacer al nio
ameno y atractivo el lugar en donde ha de ser adecuadamente preparado para la vida social.48
46
Francisco Chanona Farrera, Tipologa escolar del porfirismo, pp. 117-120. Las resoluciones del Congreso fueron 31, se incluyeron muchos detalles en cuanto a materiales, ubicacin del local, orientacin, medidas especficas
y otros detalles.
47
Jos Ins Novelo, Yucatn 1902-1906, Mrida, Yucatn, 1907, p. 156.
48
Jos Ins Novelo, op. cit., p. 156.
49
Otras poblaciones donde se construyeron escuelas durante el Porfiriato, adems de las sealadas y de las de
Mrida, fueron: Tixkokob, Maxcan, Sey, Acanceh, Abal, Hocab, Tixphual, Sucil, Izamal, Motul, Muna, Peto,
Sotuta, Homn, Teya, Temax, Tekit, Tahmek, Halach, Sanahacat, Kantunil, Muxupip, Suma, Espita, Kinchil, Mama y
varios ms.
309
Jos Ins Novelo, op.cit., pp.157, 158. La modernidad reflejada en el programa arquitectnico proporcionado,
para el mejor desarrollo del nio: vestbulo, oficina para la Direccin, dos piezas para vestuario, otra para biblioteca
escolar, otra para tiles escolares, salas para clases, saln de actos, gimnasio, patios de cultivo, jardines, recreo, habitacin para el director y sanitarios.
51
Fernando Bautista Buenfil y Sonia Rodrguez Martnez, Las escuelas yucatecas durante pp. 66, 67. En 1908
se indica que se unificaron todas las escuelas de Halach, Tizimn, las de nias de Peto y las de nios de Espita.
52
Francisco Chanona Farrera, Tipologa escolar del porfirismo, p. 111.
310
propio de la tendencia eclctica del momento histrico, muestra de modernismo, contra el tipo
introvertido, pervivencia del patio central de las construcciones del perodo virreinal.53
El equipamiento escolar construido en el Porfiriato hubo de heredarlo los siguientes gobiernos,
y al parecer fue suficiente por muchos aos como para considerar la edificacin de muy pocos
nuevos planteles, al menos en locales especficos.
Es importante sealar la carga simblica-funcional que las escuelas construidas en el Porfiriato
tuvieron, y mantuvieron, al ubicarse en el primer cuadro de los barrios de las ciudades o de
las poblaciones.54
Los cdigos expresivos de los edificios escolares posrevolucionarios tenan que reflejarse en
contra de las caractersticas clasicistas de la arquitectura del perodo porfiriano. Los mensajes
del licenciado Jos Vasconcelos fueron bien recibidos en la ciudad de Mrida, y las tendencias
arquitectnicas nacionalistas regionales, el neocolonial y el neomaya fueron apareciendo desde
fines de la segunda dcada del siglo pasado y se manifestaron de manera ms evidente en la
tercera y cuarta dcadas. Sin embargo, en la arquitectura escolar surgieron obras de tendencia
neocolonial y de otra corriente que tuvo su apogeo en la arquitectura popular: el art-dco.
Al trazarse la ampliacin norte del Paseo de Montejo en 1926 hasta la glorieta donde hoy se
localiza el Monumento la Patria, la escuela particular Modelo fue afectada, ya que se ubicaba en
ese costado. Esto motiv una intervencin que permitiera reubicar su acceso del lado de dicho
Paseo; as, fue aprobado y construidos el prtico y otras adaptaciones bajo el proyecto del arquitecto Carlos Castillo Montes de Oca, de tendencia neocolonial; las obras fueron inauguradas el
mismo ao.55
Otro inmueble de tendencia neocolonial construido a fines de la dcada de los veinte del siglo
pasado fue la Escuela Plutarco Elas Calles. sta se ubic en la avenida Cupules; form parte del
53
311
equipamiento que se construy para el reparto habitacional Jos Dolores Patrn. La escuela fue
inaugurada el 1 de febrero de 1929 por el gobernador lvaro Torre Daz; fue construida por la
Compaa Tcnica de Yucatn, S. A. El acceso se ubic en chafln y en dos alas se dispusieron
ocho salones, de un lado cuatro aulas para nios y del otro para las nias; contaba cada seccin
con su respectiva direccin y sanitarios, se consideraron amplios corredores y rea para campo
deportivo.56 Destacan en la fachada el escudo nacional sobre el acceso principal, el remate y los
decorados con teja; aos despus se dispuso cambiar el nombre e imponerle el de David Vivas
Romero, el cual conserva a la fecha.
Tambin de tendencia neocolonial, fue remodelado el edificio principal de la Universidad de
Yucatn, obra que proyect el arquitecto Carlos Castillo Montes de Oca, y realizada entre 1938
y 1941. Este inmueble de la principal institucin educativa del Sureste del pas mantena su fisonoma de la poca virreinal y luca por mucho anticuado frente al teatro Jos Pen Contreras, de
finas lneas clasicistas. El arquitecto Montes de Oca emple de nuevo el prtico como smbolo
inequvoco del neocolonial, disponiendo el acceso en chafln y remetindolo levemente para
procurar mejorar el vestbulo. Otro cambio significativo fue la construccin en el tercer nivel
para salones y laboratorios con sus corredores con arcos mixtilneos; tambin se construy el auditorio para 400 personas sobre el gimnasio, se ampli la biblioteca, as como otras obras.57 Cabe
sealar que para la construccin del tercer nivel fue necesario demoler los techos y sustituirlos
por un entrepiso de concreto armado.
Finalmente, como antecedente del tema de educacin del perodo moderno, se hace mencin
de dos colegios del interior del estado construidos en los aos treinta del siglo pasado: en Tecoh se construy la Escuela Guillermo Palomo y en Dzidzantn la 20 de Noviembre, ambas
tienen grabados en sus fachadas los aos de 1936 y 1940, la fecha de inauguracin. Ambos
inmuebles presentan caractersticas del art-dco, por su manejo geomtrico de los diversos
elementos compositivos.
56
57
312
Lo anteriormente expuesto pone en evidencia cmo antes de la dcada de los cuarenta a Yucatn
slo haba llegado la modernidad del art-dco, sin embargo, esto slo lo fue para los aspectos
formales, pues en lo relativo a los esquemas, funcionamientos y la incorporacin de tcnicas no
se hicieron innovaciones.
La situacin fue muy distinta para la ciudad de Mxico, en donde desde la dcada de los aos
veinte haban aparecido las primeras manifestaciones de la llamada arquitectura moderna; en el
gnero de educacin fue iniciando la dcada de los aos treinta con la labor del arquitecto Juan
OGorman, quien ya haba optado por la tendencia radical al plantear que la arquitectura slo
tena un fin, la funcin para la que fue requerida, y la belleza se encontraba en la expresin de
su funcin y eficiencia; adems, estableca la diferencia entre los arquitectos tcnicos y artistas,
siendo los primeros los encargados de servir a la mayora y los segundos a la minora. l adopt
el funcionalismo radical por convicciones morales atendiendo a los problemas polticos, econmicos y sociales de su poca.58
La obra del arquitecto fue variada y rica en expresiones e incluso con diferentes tendencias, sin
embargo, fue lo realizado al frente de la Oficina de Construccin de Escuelas de la Secretara
de Educacin Pblica del Distrito Federal en 1932 en donde se encuentran los antecedentes a la
arquitectura educativa moderna.
En el ao de 1932, el arquitecto Juan OGorman logr edificar con un milln de pesos 25 escuelas nuevas,59 en las cuales introdujo los principios de sistematizacin del programa, tipificacin urbana y racionalizacin del sistema constructivo, dando como resultado un instrumento
conceptual que norm las escuelas denominas como Una nueva escuela: econmica, sencilla
e higinica. Las innovaciones ms importantes consistieron en realizarlas con un mdulo con
mltiplos de 0.15 x 0.15 el ancho de un ladrillo, para alcanzar medidas de 3, 6 y 9 metros de
58
Ricardo Alonzo R., et al., Juan OGorman, actualidad de ideas y obra arquitectnica, en J. Vctor Arias Montes,
et al., Juan OGorman, arquitectura escolar 1932, Universidad Nacional Autnoma de Mxico, Universidad Autnoma
Metropolitana y Universidad Autnoma de San Luis Potos, Coleccin Races 4, Ciudad de Mxico, 2005, pp. 16, 17.
59
Con el mismo costo, en 1923, el arquitecto Carlos Obregn Santacilia construy la Escuela Benito Jurez con
expresin nacionalista neocolonial.
313
ancho o largo; un estudio detallado de la orientacin de las mismas para no permitir los vientos
nocivos del norte, proponiendo secciones de tubos de albaal en la parte superior de las paredes
para permitir la aireacin del saln y abiertas hacia el sur, con corredores cubiertos. Se elimin
toda decoracin y tan slo se aplicaron aplanados de cal y el uso de colores populares para la
identificacin de los edificios, segn fuera su uso. En relacin con la disposicin o esquema
tipolgico, las aulas se dispusieron en bloques lineales o en ngulo en forma de T y en la perpendicular se ubicaron los servicios, esto permiti la construccin de dos patios separados por
los servicios. Fig. 21 y 22
Estas obras se realizaron entre los aos de 1932 y 1935, y fueron obras flexibles al contexto y a
sus circunstancias, producto del funcionalismo radical, y denominadas por algunos del pobrismo mexicano.60
60
Carlos Gonzlez Lobo, La obra arquitectnica y didctica de Juan OGorman, en J. Vctor Arias Montes, et al.,
Juan OGorman, Arquitectura, pp.26-31.
314
61
Pecho Echeverra Vrguez, La poltica en Yucatn en el siglo XX (1900-1964), Maldonado Editores, Mrida, Mxico, 1985, p. 101.
315
62
316
As mismo, inform respecto de la Educacin Preescolar, que las tareas que desempeaba dicho
departamento haban consistido en la seleccin del personal para los jardines de nios, de cuya
seleccin apunt: se hizo aplicando modernos mtodos de medicin objetiva y psicotcnica,
para escoger entre los concursantes a los ms aptos.64
Fue as como el 26 de septiembre de 1942 que el Departamento de Proteccin a la Infancia del
gobierno del estado inaugur su primer Jardn de Nios, anexo a la Escuela Nicols Bravo65 en
cuya nota periodstica66 se inform de su capacidad para atender a setenta y cinco alumnos; que
haba sido equipado con muebles, juguetes y dems elementos que la psicopedagoga estableca
para esos planteles, y se aadi que de acuerdo con las tcnicas ms modernas en la materia,
se har un diagnstico psicolgico y de la conducta de cada alumno, que sirvan de elementos
para el trabajo de las educadoras67 La decoracin interior la realiz el pintor Armando Garca
Franchi, y se agreg, segn la nota periodstica, que sta responda armnicamente a la misin
del plantel; a este jardn de nios le siguieron muchos otros, tanto en la ciudad de Mrida como
en el interior del estado.
Esta dcada se puede dividir en dos partes, en coincidencia con los programas nacionales: la
primera, del planteamiento del licenciado Torres Bodet,68 con la construccin del Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto; y la segunda, como resultado del Programa Proconstruccin de
Escuelas que de 1947 a 1950 edificaron 17 planteles escolares financiados por el gobierno del estado y la iniciativa privada como apoyo al citado programa; las empresas que participaron fueron
la Unin de Productores Henequeneros, Compaa Harinera Peninsular, Alianza de Camioneros
de Yucatn, as como la Junta Promejoramiento de la Ciudad de Mrida. Fig. 23 y 24. En el mbito
64
317
educativo, se construy una Sala de Conciertos llamada Jos Jacinto Cuevas, para 1,000 espectadores. Fig. 25-26
En el discurso oficial plasmado en el Informe de Gobierno, del gobernador Ernesto Novelo Torres, del mismo ao, seal que el propsito de dicha obra fue el de dotar al estado de un
centro docente tipo de primer orden, de un establecimiento experimental que abarcara desde el
Jardn de Nios hasta la Escuela Normal.69 Con esta obra se materializaba la Ley Orgnica de
la Educacin Pblica del 31 de diciembre de 1941, promulgada por el presidente Manuel vila
Camacho. Al respecto de la fecha de inauguracin en septiembre 16, seal que fue como
un homenaje a la Patria, que necesita urgentemente elevar el nivel de instruccin y de cultura
de sus hijos.70
El discurso poltico denotaba claramente la posicin del Estado como el dador de instruccin y
cultura, mediante un centro docente tipo de primer orden y de un establecimiento experimental
al congregar todos los niveles de instruccin en un mismo espacio.
69
Informe del ciudadano Ernesto Novelo Torres, gobernador constitucional de Yucatn, ante la XXXVI Legislatura
del Estado, ao de 1945, Mrida, Mxico, p. 25.
70
Idem.
319
El proyecto y la obra estuvieron a cargo del ingeniero Manuel Ambilis y del arquitecto Max Ambilis, y los murales del interior del edificio fueron de Miguel Tzab y Armando Garca Franchi.
Sin embargo, el conjunto tena deficiencias en relacin con la orientacin de las aulas y el emplazamiento en la zona central de la ciudad, aspectos que fueron muy cuestionados; en varias
ocasiones, tanto el gobernador, quien autoriz la construccin, como los autores del proyecto,
trataron de justificarlos.
El da de la inauguracin apareci en la prensa una plana completa con fotografas e informacin
del edificio, la crnica71 inclua, entre otros aspectos, un apartado relativo a la higiene escolar, en
donde se criticaba la orientacin equivocada de los salones al ubicarse las ventanas en las zonas
de mayor incidencia solar en Yucatn; as mismo, se criticaba el emplazamiento del conjunto,
ubicado en el rea ms baja de la ciudad, motivo por el cual esta zona se inundaba en temporadas de lluvias, haciendo muy difcil el acceso y la salida de este sitio; la presencia del mercado
grande a espaldas del centro educacional y los olores y contaminacin por la basura que generaba el mismo, fueron sealados como aspectos negativos para la poblacin escolar; por ltimo se
apuntaba el inconveniente de estar rodeado de calles estrechas y sin rboles. Fig. 27
71
320
El conjunto del Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto constaba de tres pisos: el ala derecha en planta baja estuvo destinada al jardn de nios; el ala izquierda de la misma planta y el
primer piso, a la escuela primaria, y el segundo, a la Normal Urbana. La distribucin funcional
del conjunto se dise planteando una espina un gran corredor abierto con columnas que
atravesaba de oriente a poniente el terreno, a lo largo de la cual se conectaban los pabellones
de los salones, los que a su vez creaban patios entre ellos; y en el remate de la espina se ubic
el teatro; en un rea paralela a sta, en la fachada norte y desligada de las otras, se aloj la zona
del knder. Las oficinas administrativas y los servicios se emplazaron en el edificio principal que
miraba al sur y su distribucin era tambin lineal. El funcionamiento del conjunto fue uno de los
atributos ms notables, al emplear las soluciones lineales para conectar y controlar las distintas
reas desde el inicio de la espina; otra cualidad lo fue el planteamiento de corredores techados
a lo largo de los cuerpos por los que se acceda y vestibulaba los salones. Fig.28
72
321
Un anlisis del esquema mostr cmo todos los cuerpos longitudinales que conformaban estas
reas estaban orientados norte-sur, por lo que las ventanas miraban al oriente y poniente, en
consecuencia, reciban insolacin del oriente por la maana y por la tarde del poniente, aunado a esto hay que sealar la amplitud de las ventanas, que si bien es cierto en otra orientacin
constituiran una virtud por la cantidad de luz y viento que dejan pasar, no as con la insolacin.
Si bien en la zona poniente se ubicaban los corredores de acceso a las aulas, hecho que las
protega de la insolacin por la tarde, los aspectos relativos a la ventilacin e iluminacin no
se resolvieron.
Respecto de su expresin formal, la presencia de largos corredores con columnas y la pronunciada horizontalidad acentuada por el tratamiento de las losas fue lo que marc un cambio respecto
de los lenguajes anteriores; sin duda alguna la forma fue resultado de la funcin. En los aspectos
relativos a la tcnica, utiliz el concreto armado en trabes, columnas, prgolas, algo que ya era
usual en el medio; ya que en los muros se sigui utilizando la mampostera.
El edificio prest servicios poco tiempo para el objetivo que fue concebido, luego cambi de uso
y nombre, y finalmente fue demolido a fines de los ochenta del siglo pasado.
322
73
323
De manera similar a la Albino J. Lope, esta escuela se ubic remetida del alineamiento de la
acera; el acceso se encuentra en la esquina como respuesta a ella, aunque los brazos no presentan una disposicin simtrica; en la fachada que mira al sur, presenta un remate al centro del
paramento. El esquema es un tanto confuso al presentar una doble cruja al frente, y en la parte
posterior, un esquema en C, orientado hacia el norte, con un pequeo prtico al frente; en los
brazos laterales no hay acceso directo al patio. La solucin a los aspectos climticos no es clara
al cerrarse a las ventilaciones cruzadas. Fig. 33 y 34
74
324
325
Al inicio de los trabajos en abril de 1948, el arquitecto Sobrino Campos manifest que sera
un edificio de dos pisos, con tres departamentos abajo y tres arriba, () con toda la comodidad que exige la pedagoga moderna.80 Sin embargo, el proyecto destinado a la escuela
prcticamente idntico al de la Escuela Candelaria Ruz Patrn, no fue considerado para ese
terreno y su orientacin, aspecto que tampoco atendi el constructor e hizo los cambios pertinentes, por lo que se construy disponiendo los salones hacia las orientaciones ms desfavorables y cerrndose al norte, orientacin en donde penetra la luz de mejor calidad y la brisa
del mar. El esquema lineal del proyecto responda a aspectos funcionales y de control hacia
todas las reas; es evidente que el discurso del arquitecto Sobrino se refiri a estos aspectos
funcionales, ya que en lo referente a los climticos no fueron considerados, lo que sin duda
propici que estas cualidades perdieran valor. Fig. 35 y 36
La obra fue puesta en servicio en septiembre de 1949.81 Con motivo de su inauguracin al ao
siguiente, la prensa la describi como:
de tipo moderno, con muros de piedra aparente, dos pisos, con 6 aulas, capacidad para 252 alumnos.
Consta de direccin, secretara, cuatro departamentos sanitarios para alumnos y uno para maestros,
baos, teatro al aire libre con un aljibe bajo el escenario, patio de juego, cancha de bsquetbol, un
cobertizo, dos corredores, biblioteca, vestbulo, bodega y despacho del conserje.82
80
326
Se desconoce quin realiz el proyecto, al igual que el proyecto de la Escuela lvaro Obregn;
fue enviado de la ciudad de Mxico; el esquema de ambas escuelas es muy similar, sin embargo,
la solucin empleada en la Candelaria Ruz Patrn es coherente con el clima al orientar el cuerpo
principal de salones de clase al norte, no es el caso de la lvaro Obregn que dispone el cuerpo
principal hacia al orienteponiente dejando ciega la fachada hacia el norte, orientacin ms
favorable en nuestro medio.
El manejo de la volumetra en el conjunto y las proporciones de los vanos denotan un estudio
cuidadoso; el enmarcamiento otorgado a las ventanas hacia el norte pronuncian su horizontalidad; la esquina se trabaj para destacar el acceso, responder a la misma y romper con la rigidez
del volumen, hecho que se acentu por la incorporacin del elemento escultrico. Un signo ms
de modernidad se lo dio el hecho de remeter el acceso y cargar el gran volumen, en un alarde
tecnolgico. Fig.37 y 38
83
327
La planta se resolvi con un esquema en forma de C, abierta al sur; el brazo principal del cuerpo de los salones miran al norte y se protegen del sur mediante el corredor que da acceso a los
mismos en ambas plantas; el esquema es lineal y se disponen a lo largo todos los salones; en los
brazos ms pequeos se dispusieron la administracin y el saln de cantos. En el extremo sur del
terreno se construy una seccin del teatro, ya que el terreno terminaba de forma irregular y no
cupo. Fig. 39 y 40
Fig. 39 Patio y corredores
de los salones de la Escuela Candelaria Ruz Patrn,
Progreso, 1948.
Fig. 40 Croquis Escuela
Candelaria Ruz Patrn,
Progreso, 1948.
328
87
329
331
Respecto de la autora de las obras, no fue posible contar con la identificacin de todas, sin embargo, se pudo apreciar que un mismo autor, el arquitecto Manuel Ambilis, en 1945, cuando
dise el Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto,88 se sum a la modernizacin en este gnero, en lo que respecta a los esquemas de funcionamiento y formas, y tres aos ms tarde regres
al neocolonial, como se evidencia en la Escuela Jos Esteban Sols, financiada por la Unin de
Productores Henequeneros; con el mismo esquema de los edificios escolares, el autor slo cambi la expresin formal, del dco al neocolonial.
Indiscutiblemente, con el Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto se inici la modernizacin
del equipamiento educativo en Mrida; en ste se incorporaron los cdigos expresivos formales,
funcionales y tcnicos, propios de la arquitectura moderna, mas no as en lo relativo a la adecuacin al sitio. Fue en el puerto de Progreso en la Escuela Candelaria Ruz Patrn en donde esta
incorporacin se dio de manera completa, los cdigos arquitectnicos propios de la modernidad
empleados respondieron al sitio y al lugar.
El discurso encontrado en la dcada de los cuarenta se remiti a aquellas obras en las cuales se
manifestaron cambios verdaderos en lo arquitectnico: en el Centro Educacional Felipe Carrillo
Puerto y en las escuelas del puerto de Progreso; en el primero, ste expresaba notoriamente la
posicin del Estado como el dador de instruccin y cultura a travs de un centro docente experimental, fundamentalmente al concentrar a varios niveles de instruccin en un mismo espacio.
En las escuelas de Progreso, el discurso estuvo a cargo, por un lado, del constructor, y por otro,
del peridico; ambos las presentaron como modernas. Ms all de las inconsistencias encontradas en el diseo de la Escuela lvaro Obregn, al contraponerse lo expresado respecto de la
comodidad exigida por la pedagoga moderna, en donde sin duda se refiri a los aspectos funcionales y no a los ambientales, y en el otro, por la incongruencia presentada al expresar que era de
tipo moderno y ligeramente maya, por la presencia de una escultura de un chaacmol al frente.
88
Enrique Urzaiz, estudioso del art-dco, afirma que el Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto fue el primer
edificio de equipamiento moderno, asimismo, lo considera como el edificio ms funcionalista de los aos cuarenta en
Yucatn, por su expresin moderna y funcionalista. Enrique Urzaiz Lares, Arquitectura en trnsito, pp.118, 123.
333
Se realizaron cuatro escuelas, de 1950 a 1954, con las caractersticas funcionalistas que se haban incorporado
desde el ao de 1948.
90
En 1950, el Edificio Escolar Municipal Nm. 18 en Chuminpolis, al oriente de la ciudad de Mrida; en 1951, el
Edificio Escolar Nm. 19 en la colonia Sambul, al sur de la ciudad, y la Escuela Chech de las Torres que construy
la iniciativa privada.
91
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 30 de septiembre de 1950.
334
La fachada del edificio de dos niveles se resolvi con un volumen prismtico con predominio
horizontal, acentuado por el manejo de delgadas molduras que corren a todo lo largo. Este tratamiento pesado, tan slo aligerado por las mencionadas molduras, se debi a la orientacin del
mismo, que mira al poniente, la de mayor incidencia solar.
92
335
El esquema utilizado fue lineal, a travs de un eje se recorre y se accede a las reas del conjunto; los cuerpos destinados a los salones se orientaron norte-sur, lo cual permiti una adecuada
ventilacin e iluminacin, y el sur se protegi con los corredores de acceso a los salones. El sistema constructivo empleado fue de trabes, columnas y losas de concreto armado y en los muros
cargadores, mampostera de la piedra de la regin. A pesar de su apariencia un tanto pesada, los
aspectos funcionales y ambientales se resolvieron ptimamente; la expresin formal, aunada al
gran volumen horizontal horadado por una serie de ventanas, represent una propuesta nueva
alejada de los estilos del pasado.
336
En enero de 1954 los hermanos maristas inauguraron sus nuevas instalaciones construidas frente
al parque de la colonia Itzimn; dejaron la casa-quinta de la calle 60, por un terreno emplazado
en un zona al norte de la ciudad (que estaba en franca consolidacin y poblamiento), que les
permitira instalaciones ms cmodas y completas. El edificio fue proyectado por los ingenieros
lvaro Ponce Pen y Ulises Gonzlez Torre, y los hermanos maristas.93
Fig. 48 Croquis
Escuela Presidente Miguel
Alemn, Kanasn, 1950
(planta baja).
Los promotores de la obra declararon a la prensa: ...el nuevo Colegio Montejo es una sntesis
de modernismo y tradicin94 y el espritu que anima el plantel es el mismo que privaba cuando
don Luis Quiroga estableci el Montejo por primera vez el 13 de enero de 193095 en donde
espritu tradicional se acoge en un ambiente que respira modernismo.96
93
Los hermanos maristas determinaron el programa, y el proyecto se realiz bajo sus lineamientos y supervisin. Elvia Mara Gonzlez Canto, entrevista realizada al ingeniero lvaro Ponce Pen, autor de la obra, diciembre de 2006.
94
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 12 de enero de 1954.
95
Idem.
96
Idem.
337
Fig. 49 Croquis
Escuela Presidente Miguel
Alemn (planta alta).
De los materiales empleados, destacaron las paredes de los salones, amosaicadas en los rodapis, en color verde, por ser el ms adecuado para la vista de acuerdo con la pedagoga, as como
tambin en los pizarrones. En las paredes que separan los salones de clase de los corredores
aspecto que constituy una innovacin se utiliz una fachaleta de color pardo, lavable, que
recobraba su aspecto limpio y brillante en cualquier momento. Respecto de lo ambiental, una
doble hilera de ventanas hacia el norte y el sur proporcion una ventilacin cruzada y la luz
ms adecuada para los salones, con grandes ventanales hacia el norte y al sur protegidos por
corredores. Fig. 50-53
338
El esquema planteado fue lineal: dos cuerpos principales de salones se ligaron a travs de un
pasillo abierto con columnas, que a su vez crearon dos patios con cualidades diferentes. Este
esquema funcional permiti tener un control visual de todas las reas. La expresin formal en
la fachada, sin duda denotaba un alarde estructural al prolongar una delgada losa hacia delante sostenida por esquelticas columnas metlicas; el plano de frontal de la fachada se enmarc
para la colocacin del nombre de la institucin; una secuencia de cartelas verticales cubre el
elemento de circulacin que se encuentra detrs. La tcnica constructiva utilizada consisti
en trabes, columnas y losas de concreto armado y muros divisorios de block vibroprensado.
El esquema planteado tena mucha similitud con lo que el CAPFCE ya estaba realizando en
339
Mxico y en otros estados desde principios de los aos cuarenta, sin embargo, la cualidad en
este caso fue el aprovechar el esquema lineal, adecuado para el uso, adaptndolo funcional
y ambientalmente.
97
Elvia Mara Gonzlez Canto, entrevista con el ingeniero Ramn Lpez Peraza, quien dise y construy la escuela, el 7 de junio de 1998.
98
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 1 de febrero de 1957.
99
Vid. Infra, captulo 3, subcaptulo 3.2.2.
340
100
341
El edificio fue proyectado y construido por el ingeniero Ramn Lpez Peraza y desarroll el mismo esquema que haba utilizado en la Escuela Santiago Meneses. Al igual, lo plante en forma
de C, y ubic el acceso en esquina; destacndolo por el manejo de un chafln en el cual enmarc el acceso e incluy un tratamiento plstico de piedra; de ste surgan los brazos del edificio de una sola planta que acusaban su horizontalidad por el manejo de la losa volada hacia el
frente, el rodapi de piedra y los alfizares que enmarcan las ventanas. La solucin del patio no
se logr, por las dimensiones desproporcionadas. Este edificio, al igual que el otro mencionado,
tambin se construy de mampostera en los muros y las losas de concreto armado. Es notable
la similitud del planteamiento del esquema en la solucin para la esquina, no as para el interior,
empleado en los aos treinta por el arquitecto Juan OGorman.
De lo anterior se puede concluir que los lenguajes utilizados en la ciudad de Mrida fueron
cambiando paulatinamente, con tendencia a los cdigos de la modernidad, sin embargo, esto se
limit casi de manera exclusiva a lo formal, con la incorporacin de la horizontalidad en vanos,
volmenes y losas y columnas esbeltas de concreto, ya que los muros en casi todos los casos
se construyeron de mampostera, a pesar de que desde el ao de 1945 se contaba ya con una
fbrica de bloques de concreto.
342
En los esquemas funcionales slo el Colegio Montejo present la tipologa empleada en las
escuelas de CAPFCE, que se haban iniciado en otros lugares del pas desde 1944; bloques de
salones ligados por un corredor, conformando reas funcionales y ambientales que, en este caso,
se orientaron de manera correcta y la determinacin del tamao de las ventanas se defini por
los aspectos ambientales; las Escuelas Santiago Meneses y Juan Crisstomo Cano y Cano presentaron esquemas de patio desproporcionados y los aspectos ambientales no se solucionaron del
todo satisfactoriamente; con toda seguridad se puede atribuir a las habilidades del proyectista.
En el interior del estado slo el puerto de Progreso continu con la tendencia moderna, como se
pudo apreciar en el caso presentado,101 con una muy alta calidad y propuesta indudablemente
moderna, contrario de lo que ocurri en el municipio de Kanasn, en la Escuela Presidente Miguel Alemn del ao cincuenta, en donde se dise con formas propias del art-dco y el esquema que se emple fue el mismo de los edificios escolares.
En esta dcada el discurso se dio nicamente en la escuela de los hermanos maristas; en l dominaron los modernismos empleados, sin duda al reproducir en el proyecto aspectos de diversa ndole ya empleados en otras escuelas maristas construidas en el pas. En el discurso se destacan los
aspectos de tipo funcional, ambientales e higinicos; por el esquema lineal y la conexin entre los
mdulos; la disposicin para resolver el asoleamiento y la ventilacin y los materiales utilizados.
343
El Plan de Once Aos lleg a los estados del pas con el nombre de Cruzada en Pro de la Educacin, los motivos que lo originaron tienen sus antecedentes en la situacin que prevaleca
a fines de los aos cincuenta, en donde si bien era cierto que se haban logrado mejoras en la
educacin pblica durante las cuatro dcadas ulteriores a la Revolucin Mexicana, tambin era
verdad que para fines de los aos cincuenta el atraso educativo an era alarmante. Un nmero
cercano a los 10 millones era analfabeto, ms de tres millones de infantes en edad escolar no
asistan a la escuela, el promedio de escolaridad de la educacin adulta era de dos aos y muy
pocos lograban concluir sus estudios, reportndose cifras del 16% en el mbito nacional y slo
del 2% en el medio rural. Aunado a esto, miles de nios padecan de desnutricin y ms de 27
mil maestros ejercan sin ttulo. Por ello, durante la administracin del presidente Adolfo Lpez
Mateos, su secretario de Educacin, Jaime Torres Bodet, formul un Plan Nacional para mejorar
la educacin primaria, el cual pretendi la incorporacin de nios en edad escolar de 6 a 14
aos al sistema de enseanza primaria; el Plan inclua la creacin de plazas en nmero adecuado para poder inscribir anualmente a nios de 6 aos, y lograr una eficiencia terminal del 38%,
de tal modo que los que iniciaran sus estudios en 1965 terminaran en 1970. El presidente Lpez
Mateos autoriz un incremento al presupuesto educativo y promovi la participacin de los estados y los particulares.
Durante la segunda gestin de Torres Bodet, con el apoyo del Instituto de Proteccin a la Infancia
y del Voluntariado Nacional, se dieron muchos adelantos en esta materia: distribucin de desayunos escolares por todo el pas, se editaron y repartieron libros de texto gratuitos para la educacin primaria, se hicieron reformas en los planes y programas de estudio de Primaria, Secundaria
y Normal, lo que trajo como resultado un incremento en la matricula, del 60%, entre otras cosas.
El presupuesto educativo se mantuvo hasta la administracin del presidente Gustavo Daz Ordaz
(1964-1970), logrndose que los efectos del Plan de Once Aos perduraran.102
De este modo, el Plan de Once aos lleg a los estados con el nombre de Cruzada en Pro de
la Educacin, y comenz una intensa campaa en la prensa, la Asociacin de Editores acord
102
Maricela Olivera Campirn, Evolucin histrica de la educacin bsica a travs de los proyectos nacionales:
1921-1999 [en lnea] direccin URL: http://biblioweb.dgsca.unam.mx/diccionario/htm/articulos/sec_6.htm, consultada el 28 de mayo de 2007 a las 12:30 horas.
344
Fig. 59 Anuncio de la
Cruzada Pro Restauracin y
Mantenimiento de Escuelas.
Imagen tomada del Diario
de Yucatn el 29 de junio
de 1960.
Fig. 60 Anuncio de la
Cruzada Pro Restauracin y
Mantenimiento de Escuelas.
Imagen tomada del Diario
de Yucatn el 14 de agosto
de 1961.
103
345
En cumplimiento con el acuerdo, el Diario de Yucatn, en coordinacin con la Jefatura del Departamento de Educacin Pblica, escogi la Casa-Escuela Mara Antonia Ancona, una de las
tantas urgentes a intervenir; as, el rotativo se dio a la tarea de la reconstruccin de la citada
escuela ubicada enfrente del parque del barrio de San Sebastin; por ser una escuela propiedad del Estado, se solicit la intervencin del Departamento de Obras Pblicas, que formul el
proyecto de la restauracin del edificio y el presupuesto. Dicho programa tena sus bases entre
las que inclua la conformacin de un Comit encargado de vigilar la realizacin de las obras
aprobadas, integrado por un responsable de la Escuela, un representante del Departamento de
Educacin Pblica del Estado, un representante de la Sociedad de Padres de Familia y la empresa involucrada.107
107
346
108
347
En el ao de 1959, el gobierno del estado firm un convenio114 con el Comit Administrador del
Programa Federal de Construccin de Escuelas para concluir 15 escuelas del interior de estado, y
como parte del mismo convenio, al ao siguiente se procedi a concluir el Instituto Tecnolgico
del Estado115 que haca varios aos que estaba en lento proceso de construccin. Con estas acciones se realizaron las primeras obras de dicho comit, despus de muchos aos de haber iniciado
su labor en otros estados del pas.
Segundo informe rendido por el C. Agustn Franco Aguilar, gobernador de Yucatn, ante la XLI Legislatura del Estado, sobre sus gestiones oficiales correspondientes al perodo comprendido del 1 de febrero de 1959 y el 31 de enero
de 1960, Mrida, Mxico, 1960. El convenio estableca el compromiso del CAPFCE para aportar el cincuenta por ciento
de las cantidades ejercidas en las obras. pp. 38, 39.
115
El Instituto Tecnolgico de Mrida comenz sus actividades en septiembre de 1961. Segundo informe rendido por el C. Agustn Franco Aguilar, gobernador de Yucatn, ante la XLI Legislatura del Estado, sobre sus gestiones
oficiales correspondientes al perodo comprendido del 1 de febrero de 1959 y el 31 de enero de 1960, Mrida,
Mxico, 1960, p. 35.
116
La medida de las aulas fue la medida oficial del mdulo 8 x 8, los talleres 16 x 8, o sea dos veces el tamao
del mdulo.
117
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 16 de enero de 1962.
348
mencionado, el Instituto sigui los lineamientos de diseo establecidos por el mismo, pero con
una adaptacin al medio local, que consisti en la adecuada orientacin de los mdulos hacia
los vientos ms favorables y la proteccin de las reas expuestas a la insolacin; utilizando a
todo lo largo de la fachada principal celosa, la cual dominaba en la composicin. El edificio
de una sola planta acusaba an ms su horizontalidad por el manejo de tres franjas sucesivas
constituidas por la prolongacin de la losa al frente, la celosa y el basamento de mampostera
de la regin. Los mdulos de edificios, aislados unos de otros, se ligaron a travs de un corredor
techado con ligeras estructuras de columnas y losa de concreto armado, para protegerse fundamentalmente de los rayos solares; los materiales y tcnica constructiva empleada fueron muros
de block y losas armadas de concreto. Fig. 63
349
118
350
351
lineal; esbeltas columnas se construyeron en los pasillos que, a diferencia de otros proyectos,
dan al frente. En la parte posterior los pasillos estn cubiertos con losas suspendidas que les dan
amplitud y reflejan modernidad, sin duda se siguieron los lineamientos generales de las escuelas
construidas por el CAPFCE, pero los enriquecieron con elementos expresivos de intercomunicacin, en este caso con losas suspendidas y juegos de trabes y columnas. Fig. 66 y 67
En lo referente a la educacin privada, se continu la incorporacin de nuevos edificios que introdujeron tanto a sus formas, esquemas, funcionamientos y sistemas constructivos innovaciones,
dependiendo de las habilidades de los proyectistas. Entre stas estuvieron:
352
Cabaln Macari.120 La escuela la proyect y dirigi el ingeniero Agustn Escalante. Fig. 68 y 69.
Del conjunto de un nivel merecen destacarse algunos aspectos: el tratamiento lineal, la disposicin de los edificios formando un rombo con patio central; en el remate de uno de sus vrtices
se aloj el teatro, elemento estructural de gran expresividad y dominio tcnico, que se distingue
por su cubierta plana, de losa armada, colgada y soportada por una sucesin de arcos y colgada
de tirantes.121 Fig. 68 y 69
120
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 14 de enero de 1962. Cabaln Macari Tayn, de origen libans, fue industrial, comerciante y ganadero; realiz labores altruistas en Campeche y Yucatn, entre las que est la construccin y
donacin de la Escuela Vadillo al gobierno del estado; III Informe de Gobierno del Ciudadano Agustn Franco Aguilar,
presentado ante la XLI Legislatura del Estado, comprendido del 1 de febrero de 1960 al 31 de enero de 1961, Mrida,
Yucatn, Mxico, 1961, p. 17.
121
Vid. supra, captulo 3, subcaptulo 3.2.2.
353
Los cuerpos de los salones se dispusieron de acuerdo con las orientaciones ms favorables y
se incluy el manejo de la celosa en donde se requiri, para evitar la insolacin. Los materiales y la tcnica constructiva utilizadas fueron los ltimos con que se contaba en la ciudad
de Mrida; emple trabelosas en los grandes claros, como el teatro y la cancha de basket ball
techada, dejando los extremos abiertos para permitir la circulacin de aire; en los salones us
losa acasetonada, en los pasillos, delgadas losas armadas, con columnas tanto metlicas de
354
esbeltas secciones como de concreto en el rea del gran vestbulo, lugar en donde se requera,
por cuestiones psicolgicas (dado el gran volumen), un dimetro mayor. La fachada se arm
aprovechando la gran pared del teatro ubicado en la planta alta del vestbulo de acceso
que se recubri con granito negro lugar en donde se coloc el nombre de la escuela; una losa
apoyada en dos columnas le antecede. Fig. 72 y 73
Esta escuela primaria fue construida por gestiones del Instituto de Proteccin a la Infancia de Yucatn, con la
colaboracin del Comit Administrador del Programa Federal para Construccin de Escuelas.
356
Espnola123 (1968-1969), se construy un mdulo con el viejo esquema del modelo Hidalgo
utilizado en la dcada de los cuarenta. Fig. 76-79
Los motivos de introduccin de nuevos modelos de arquitectura escolar obedecieron al convenio firmado en el ao de 1959 entre el gobierno del estado y el CAPFCE, lo que adems posibilit
123
Fue construida en parte de los terrenos de la finca Azcorra. Fue donado por la Secretara de Educacin Pblica,
a iniciativa de Torre, S. A., patrocinada por Ford Montejo Company de Mxico, S. A. y la Asociacin Mexicana de
Distribuidores Ford, A.C. Constaba el local de 6 aulas, rectora, explanada y servicios sanitarios.
357
358
En relacin con el empleo de cdigos arquitectnicos, se introdujeron en lo referente a la funcin espacio, pero no en cuanto a la tcnica, e ignoraron la cuestin climtica.
Fue la ciudad y puerto de Progreso el municipio de Yucatn en donde se vivi a finales de la
dcada de los cuarenta un intenso proceso de modernizacin en la infraestructura educativa.
Los otros municipios se sumaron a esta modernizacin hacia la dcada de los sesenta con la
aparicin del CAPFCE y las escuelas tcnicas. Los agentes modernizadores fueron el Estado y la
Federacin a travs de la Junta de Mejoras Materiales de Progreso y arquitectos de la Ciudad de
Mxico. Y el motivo de la modernizacin obedeci a factores econmicos: Progreso era el puerto del estado, modernizndose tambin en lo relativo a la infraestructura portuaria, en 1947, se
hace el muelle de Cabotaje, magna obra de ingeniera y de relevancia social y econmica. En la
infraestructura educativa se introdujeron nuevos cdigos arquitectnicos, en lo formal, funcin,
climtico, no as en lo relativo a la tcnica.
En la ciudad de Mrida apareci de nuevo la arquitectura moderna en 1954 con la escuela de
los maristas; los agentes modernizadores fueron los religiosos y los profesionales del medio,
ingenieros lvaro Ponce Pen y Ulises Gonzlez Torre; a partir de esta fecha se inici la construccin de escuelas que intentaban incorporar los nuevos cdigos, logrndose un resultado
parcial; los profesionales del medio fueron los principales agentes modernizadores, conjuntamente con el Estado.
En la dcada de los sesenta con la introduccin de lleno del CAPFCE, la infraestructura educativa
del estado se hizo siguiendo los lineamentos de este organismo; sin embargo, se introdujeron
algunas innovaciones en los proyectos. En esta dcada se incorporaron nuevos cdigos tcnicos,
formales y espaciales como consecuencia de lo anterior.
La iniciativa privada tuvo un papel importante en la edificacin de nuevas y modernas instalaciones. Hubo una asimilacin de los conceptos de diseo y pedaggicos por parte de los mismos,
quienes hicieron las propuestas ms interesantes y propositivas. Sin duda alguna fue en el Colegio Rogers Hall en donde se logr una sntesis de todos los conceptos desarrollados haca casi
359
40 aos, utilizando los mdulos para formar patios en las diferentes reas de cada uno de los
niveles del colegio, kinder, primarias, etc., todos estos unidos a travs de una espina que recorra
el conjunto, solucin que se vio en 1945 en el Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto; en
el Rogers Hall el ingeniero Fernando Roche neg o permiti vanos para permitir ventilaciones,
vistas, asoleamientos, ya fuera con ventanas a diferentes alturas, o la inclusin de celosas, etc.,
e incorpor la trabelosa y otros sistemas constructivos en todo el conjunto para lograr grandes
claros, dando como resultado una expresividad propia de la modernidad. Sin duda los conceptos
de diseo desarrollados por el CAPFCE fueron asimilados y mejorados por la iniciativa privada.
La idea de centros escolares en donde se agruparan varios niveles de enseanza no se volvi
a repetir por parte del Estado, fue la iniciativa privada, principalmente los grupos de religiosos
quienes los construyeron.
360
124
Se le denomin Cristiada o Guerra Cristera al conflicto armado que se dio durante el gobierno de Plutarco Elas
Calles y grupos de laicos, religiosos y presbteros catlicos, como respuesta a la aplicacin de la legislacin y polticas
pblicas que limitaron la autonoma de la Iglesia catlica; dur de 1926 a 1929. Informacin obtenida en lnea direccin
URL: http://www.divulcat.com/recursos/enciclopedia/guerra_cristera, consultada el 25 de abril de 2006, 15:42 hrs.
125
Alberto Gonzlez Pozo, Enrique de la Mora, Conaculta, Ciudad de Mxico, 2000, pp. 9-17.
361
Fig. 80 Iglesia de la
Pursima, Monterrey,
Nuevo Len, tomado
del libro Enrique de
la Mora, de Alberto
Gonzlez Pozo.
El resultado fue un edificio de sorprendente modernidad para esa poca, en donde, a decir del
arquitecto Alberto Gonzlez, Pozo logr romper con la nocin del espacio constituido por muros
laterales que soportaban una cubierta con un dualismo estructural entre muros y cubierta, consistente en una sola envolvente parablica que parta de los cimientos en forma de muro continuo
inclinndose y se elevaba hasta la cspide ya trasformada en cubierta, para luego descender
como muro. La geometra del proyecto puede definirse an existe como un par de caones
de perfil parablico que se cortan entre s, dando paso al espacio de la nave principal y los brazos
del transepto. Fig. 80
La tecnologa empleada126 para la solucin de los caones estaba an comenzando a utilizarse, por lo que el espesor otorgado a la cubierta, a decir de algunos fue excesivo, sin embargo,
comparndolo con los sistemas tradicionales, ste era muy ligero. El espacio interior resultante,
adems de presentar una continuidad espacial, se enriqueci con diferentes juegos de luces que
penetran a travs de las ventanas.
126
Juan Plazaola, El arte sacro actual, Editorial Catlica, Madrid, 1965, pp. 343-344. La incluy como uno de los
ensayos de renovacin que se estaban dando en Amrica; y seal que Enrique de la Mora, para 1929 haba tenido
el coraje de planear en Monterrey una iglesia con estructura de cemento armado y arcos parablicos; igual reconocimiento hace de la capilla de la Virgen de la Soledad en Coyoacn, en donde la planta romboidal se cubri con
paraboloides hiperblicos.
362
En el ao de 1944 se realiz un concurso para el proyecto del Santuario Nacional del Sagrado
Corazn de Jess, y en la convocatoria127 se especificaban adems de los aspectos generales
como dimensiones, locales necesarios, capacidad, entre otras cosas; al referirse a los aspectos de
la liturgia, se anex un artculo escrito por monseor Joaqun Nabuco del Brasil, titulado Iglesias
para nuestro tiempo,128 en el cual se hacan observaciones acerca de cmo deban de ser cada
una de las partes del templo de acuerdo con el rito de la Liturgia; en el documento se destacaba
el rea denominada como el espacio vital y la necesidad que se tena del mximo espacio til
para los fieles, y se seal:
El mejor estilo ser el que permita mayores comodidades para las funciones religiosas y mayor cabida
para los fieles. Y por esta razn, el estilo bizantino y sus modalidades modernas ser clasificado en primer lugar. El estilo gtico se acercar al ltimo, por () que las columnas gruesas () impiden la vista
del altar () y reducen () el espacio129
As mismo se distingua la importancia de un altar nico que dominara la nave central; la ubicacin de la cpula como la cubierta de lo ms sagrado que hay en la iglesia, que es el altar, y la
conveniencia de un campanario abierto; en relacin con la capilla mayor, se precis que:
debe ser bien distinta del cuerpo de la iglesia, levantada dos o tres gradas sobre el nivel de la nave
y separada de ella por gradas alrededor. La separacin del clero y los seglares es de origen divino, y es
voluntad positiva de la Iglesia, que el clero tenga lugar reservado en las iglesias. Separado de los fieles,
razn por la cual nuestro concilio prohbe la permanencia de seglares en coro o presbiterio durante las
funciones sagradas (). La iglesia debe construirse de tal manera que la capilla mayor no tenga que
servir, como acontece a menudo, de pasaje para uno u otro lado de la iglesia, ni aun para el clero.130
Estos aspectos son algunos de los mencionados en la carta del padre Nabuco y se destacan
porque permitieron identificar cmo en el seno del clero catlico se estaban gestando cambios
ideolgicos que posteriormente se materializaron en las obras. Hay una diferencia importante en
el tipo de esquema planteado en la iglesia de cruz latina para el caso de la Pursima de Monterrey
127
Convocatoria para el Concurso Nacional del Sagrado Corazn de Jess, en Revista Arquitectura y lo Dems,
Nm. 2, Editora Colonial, Ciudad de Mxico, 1945, pp. 30-31.
128
Joaqun Nabuco, Iglesias para nuestro tiempo, en Revista, pp. 26-29.
129
Ibid., p. 26.
130
Ibid., p. 27.
363
364
Este tipo de envolvente ejerci una gran influencia en muchos arquitectos que la emplearon en
el gnero religioso, tanto en la ciudad de Mxico como en ciudades importantes, como Guadalajara y Monterrey. Ntese la similitud entre la iglesia de la Pursima en Monterrey, del arquitecto
Enrique de la Mora, del proyecto del concurso del arquitecto Prez Palacios y la iglesia de Lindavista en la ciudad de Mxico, del arquitecto Francisco J. Serrano. Fig. 82
Ivn San Martn Crdova, Alcances en la investigacin sobre la arquitectura religiosa del siglo XX de la ciudad
de Mxico, Estudios de arquitectura y urbanismo del siglo XX, Universidad Autnoma de Puebla, ICOMOS Mexicano,
Puebla, 2006, p. 138.
365
Yucatn fue uno de los lugares que se vio envuelto de manera activa en la Guerra Cristera; el
llamado perodo de modus vivendi o de relaciones nicodmicas132 dio frutos, al igual que
en el estado norteo de Nuevo Len, en la dcada de los cuarenta, pero se hizo an con el
lenguaje que se desprenda de la ideas vasconcelistas del nacionalismo y su preferencia por las
formas neocoloniales.
La aparicin de nuevos templos fue hasta cierto punto limitado en nmero, vinculado al crecimiento poblacional del estado y de la misma ciudad de Mrida; en esta ltima se haba registrado
un crecimiento poblacional133 de tan slo el 19.9% para las dcadas de los veinte y treinta, situacin que contrasta con el crecimiento en la dcada de los cuarenta, cuando se registr un incremento en la poblacin del 47.5%, lo que se vio reflejado hasta la dcada de los aos sesenta en
el nmero de templos construidos en la ciudad y en el establecimiento de nuevas delimitaciones
parroquiales, como consecuencia de este crecimiento poblacional.
Durante los ltimos aos del perodo del Porfiriato, se construyeron en Mrida los templos del
Carmen en Chuminpolis, San Jos de la Montaa y San Jos en la Escuela Monserrat en Chuminpolis y en el interior del estado varias capillas de haciendas henequeneras, en Eknakn, San
Ignacio y en Tekik de Regil, entre otras, donde la expresin formal recurrente fue evidentemente
eclctica, propia de ese perodo, con predominio al neogtico y de orden clasicista; se emplearon frecuentemente vitrales en vanos; la orientacin de la nave pareci no ser relevante como en
el perodo colonial y el esquema en planta fue la basilical de una o tres naves.
La construccin de nuevos templos catlicos en Yucatn entre 1915 y 1940 fue prcticamente
suspendida por los efectos que crearon la Revolucin y la Guerra Cristera. La expulsin de
religiosos e incautacin de bienes inmuebles, entre otras acciones del gobierno, limit las
132
Durante el gobierno del presidente Emilio Portes Gil (1928-30) se logr frenar la Guerra Cristera y anunci que
la Iglesia se sometera a la ley sin que la Constitucin sufriera alguna modificacin. A partir de ese momento, se entr
a una relacin IglesiaEstado, a lo que los investigadores le han llamado modus vivendi o relaciones nicodmicas,
establecindose un modo de vivir en el que el Estado renunciaba a la aplicacin de la Ley y la Iglesia renunciaba a
exigir sus derechos, situacin que dur hasta el perodo del presidente Salinas de Gortari.
133
Poblacin en la ciudad de Mrida: en 1900: 57,162 hab.; 1910: 62,447 hab.; 1920: 79,225 hab.; 1930: 95,015
hab.; 1940: 98,852 hab.; y 1950: 144,793 hab.
366
posibilidades de expansin de las jurisdicciones parroquiales. Superadas las condiciones adversas, la Iglesia se mantuvo por aos rehabilitando templos que sufrieron daos significativos,
caso elocuente lo fue la propia Catedral, que perdi numerosas imgenes, retablos, el rgano
y parte de su construccin al trazarse el Pasaje Revolucin.
Las crisis econmicas que sufri el Estado por las cadas en el precio del henequn, entre 1915
y 1940, tambin influyeron en limitar las posibilidades de considerar la construccin de nuevas
sedes parroquiales.
La principal obra religiosa nueva que se concret entre 1920 y 1930 fue la ampliacin del templo del puerto de Progreso, dedicado a San Jos, frente a la plaza Independencia. La construccin de la iglesia haba quedado suspendida durante la segunda dcada del siglo; fue modificado
el proyecto que se tena, y se concluy con limitados alcances de comodidad y con su cubierta
de madera y tejas; este edificio fue sustituido por otro dedicado a la Pursima Concepcin, bendecido en 1942.
367
De esta produccin se seleccion una parte de los templos registrados, considerando algunas
caractersticas que los distinguen de los dems, como los materiales y tcnicas de construccin,
la jurisdiccin territorial y las innovaciones formales y ambientales.
De acuerdo con este criterio, se analizaron de esta dcada cinco inmuebles: los templos de las
poblaciones de Holc, el principal de Progreso, Cozumel y en la ciudad de Mrida el santuario
de Santa Teresita del Nio Jess en la colonia Garca Giners y San Rafael Arcngel en la colonia Chuminpolis.
134
135
368
El proyecto del arquitecto Castillo estaba situado frente al parque Independencia, dando a dos
calles, con la fachada mirando al poniente; ste tena una capacidad para mil quinientas personas; era de planta basilical, de tres naves, con tres puertas frontales, una mayor y dos laterales, en
la parte ms elevada de la fachada estaba una cruz de cemento armado, de 1.30 metros de altura
por 0.80 centmetros de espesor. En la parte posterior de la obra, en su ngulo noreste, se encontraba el campanario, con cuatro arcos, en los que estaban 2 campanas grandes y 2 chicas.
El interior meda, sin incluir el presbiterio, 34 metros de largo por 16.25 metros de ancho; las
naves laterales medan 7 metros de altura y la central 10 metros. El templo tena tres altares: el
mayor al centro, con un nicho dorado, destinado para la imagen de la Virgen de la Pursima Concepcin, a la cual estaba consagrado el templo. En las naves laterales haba un altar en cada una
de ellas, con seis nichos cada una destinadas a distintos santos. No se especifica la ubicacin
exacta de los confesionarios ya que slo se dice que estaban a los lados de las naves laterales
y un plpito. A la entrada y en la parte superior, un lugar construido con una balaustrada de
mrmol y granito, destinada al coro, y a un lado, una escalera de caracol oculta comunicaba
al coro y a la azotea. As mismo, contaba con cuatro anexos laterales en donde se ubicaban el
baptisterio y las oficinas.
Al fondo, cerca del Altar Mayor, haba una escalinata acabada en granito, de cuatro peldaos,
que daba acceso al presbiterio y en cuya base haba otra balaustrada, siempre de mrmol, para
el comulgatorio. Las arqueras interiores fueron hechas de mampostera. Todo el piso del templo,
de mosaicos en jaspe blanco y negro y el templo contaba con un sanitario y con alumbrado
fluorescente, aspectos que se consideraron distintivos de modernidad.
Por la descripcin anterior, se puede percibir claramente que se respondi a un programa arquitectnico tradicional, tanto en el esquema planteado como en la distribucin de diversas reas,
as como en la costumbre de ubicar ms de un altar y numerosos nichos para imgenes.
En relacin con el tratamiento formal, el arquitecto Castillo incorpora en este gnero de edificios
en nuestro estado una expresin novedosa moderna en su tiempo con elementos propios de
369
No se resea quin fue el autor del proyecto, aunque s el del maestro de obras, Sr. Jos Gabriel
Molina, y el nombre del prroco que promovi su construccin.136 Es evidente que se construy
con las formas y los sistemas tradicionales, y no hay la incorporacin de elementos nuevos, es
decir, se estaba respondiendo a una necesidad de tipo religioso. (Kantunil y Holc eran, como
hasta hoy, las poblaciones ms importantes de aquel municipio. En Holc no se registran construcciones religiosas previas a la descrita, a diferencia de Kantunil, cuyo templo fue construido
en el perodo virreinal, dependa de la Guardiana de Izamal.) Fig. 85 y 86
137
371
El proyecto del santuario consider tener su acceso principal mirando al norte, al frente del parque de Las Amricas. Se proyect de una nave,138 un crucero, tres capillas a cada lado de la nave
en los correspondientes contrafuertes, cada una con ventanas de medio punto altas. Constara de
una torre para el campanario de 18 metros de alto ubicado a la izquierda del prtico, tal altura
se consider para no restarle perspectiva a la cpula ubicada en el crucero, de 18 metros de dimetro y a 29 metros de altura desde el interior; el diseo de sta contemplaba estar compuesta
de ocho gajos, cada uno con tres ventanas con cerramiento en forma de arcos de medio punto.
Es de destacar que se proyect dicha cpula de mayores dimensiones de todas las construidas en
Yucatn, incluso de mayor dimetro que la del Teatro Pen Contreras.
A los extremos del crucero se levantaran altares rematados por grandes rosetones. El presbiterio
sera construido de acuerdo con el tamao de la nave de 12 metros de ancho. A la derecha del
prtico principal, cubriendo el baptisterio, se levantara una pequea cpula. Los confesionarios
quedaran empotrados en las bases de la cpula y en la parte posterior del santuario, a uno y otro
lados del presbiterio; se construiran en dos pisos las habitaciones para bodegas, sacrista, saln
de actos y rgano. En la parte anterior, como es usual en las iglesias coloniales, estara el coro.
El arquitecto Castillo sigui empleando las normas tradicionales para el diseo del templo, como
lo evidencian la ubicacin de las distintas reas; decidi modificar la orientacin tradicional
del oriente-poniente para disponerlo en sentido norte-sur, el esquema longitudinal que decidi
utilizar requera de la longitud ms larga para su desarrollo,139 a la vez que el parque se ubicaba
hacia el norte.
A pesar de que la prensa calific el estilo de la iglesia como colonial o siglo XVI () con
mltiples detalles tomados de las catedrales europeas y sugeridos por el padre Joaqun H. Ricalde
al arquitecto Carlos M. Castillo, quien traz, con la colaboracin del prroco, los planos140
En realidad estaba respondiendo al neocolonial, un estilo que el arquitecto Castillo desarroll en
Mrida en mltiples casas y edificios. Fig. 87
138
Las dimensiones seran: largo interior, 53 m; crucero, 30 metros; ancho de la nave nica, 12 metros.
El terreno meda 40 x 82 metros y su extensin ms corta era mirando al norte.
140
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 24 de mayo de 1943.
139
372
141
Una placa fijada en la fachada del templo da crditos como director tcnico de la obra al Arq. Carlos Castillo
Montes de Oca y al Sr. Bartolom Cets como maestro de obras.
373
El interior lo resolvi con una planta de saln; en el altar consider el nicho principal para la
imagen del patrono, y a los costados para otras imgenes; al frente, como tradicionalmente se
haca, ubic el coro en planta alta. Por lo anterior, se aprecia que el arquitecto Castillo mantuvo
el criterio de diseo tradicional de las iglesias, tanto en el programa arquitectnico como en la
composicin y su preferencia por la expresin formal del neocolonial. Fig. 88
El arquitecto Flix Mier y Tern construy a partir de mediados de la dcada de las cincuenta numerosas viviendas modernas en el norte de la ciudad de Mrida.
374
tanto en el interior como en el exterior. En este caso, la planta de saln, consider integrar tres
pequeas naves soportadas por arcadas.
Es evidente que el arquitecto Castillo toma la idea de la parroquia de Progreso y tan slo la
adapt; utiliz el cuerpo central de dicha parroquia y con eso la desarroll. El interior similar,
pero ms pequeo, y dentro de ese cuerpo nico en una planta de saln, introdujo tres pequeas
naves soportadas por arcadas.
El esquema arquitectnico resuelto fue el tradicional: a la derecha de la entrada ubica el baptisterio, y a la izquierda, la escalera en forma de caracol que conduce al coro en la parte de arriba.
Evidentemente en el mismo estilo arquitectnico, neocolonial.143 Fig. 89 y 90
Del anlisis realizado a estos templos se observ que cuatro de ellos fueron diseados por el
arquitecto Carlos Manuel Castillo Montes de Oca, y en todos emple un mismo lenguaje arquitectnico, el neocolonial; en lo que respecta al tipo de planta empleado, utiliz el esquema
143
375
clsico de planta de saln; continu con las normas tradicionales, y la disposicin de los elementos obedeci a la tradicin de la Liturgia; en el santuario de Santa Teresita del Nio Jess
continu con la disposicin espacial tradicional, pero utiliz un esquema de planta de cruz
latina con capillas laterales y una gran cpula en el crucero, caracterstica del renacimiento;
siempre con el mismo lenguaje neocolonial.
En lo que respecta a los aspectos constructivos, se introdujeron pocos cambios, en todos los
casos se utiliz el sistema tradicional de muros de mampostera, aunque de menor espesor, ya
que se construyeron estribos con castillos de concreto. En las cubiertas se sigui empleando el
techo plano a base de vigas de hierro y concreto, con excepcin de la iglesia de Holc, que fue
construida en forma de bveda, de bacpek.
376
377
en ambos lados, con que se tech la nave principal para librar un claro de 12 metros a una
altura de 9 metros aproximadamente, en donde el sistema utilizado permiti un plafn plano y
liso, carente de algn efecto de pesadez; as como el gran claro del arco de ojiva de la fachada
principal. Fig. 91 y 92
378
379
Al respecto del diseo, el prroco de la iglesia, el padre Tovar, expres que si bien su diseo no
estaba muy apegado al concepto tradicional de nuestras iglesias, se le antojaba muy cmoda y
propia para el clima, al mismo tiempo que el no tener puertas permitira el acceso libre a cualquier hora a los devotos de los pueblos y la ciudad para la veneracin de la Sagrada Imagen.147
En este templo se modific el planteamiento espacial ya que se omiti el coro alto en el acceso
principal; es probablemente el primer templo en la ciudad en que se dise la planta de la nave
de forma irregular y en el que se le dio importancia a la isptica, tanto, que se asoci con un
teatro; sta no fue tan pronunciada como se registr en la prensa, pero la inclinacin del piso del
acceso hacia el presbiterio evidentemente se hicieron con la intencin de tener un mejor dominio hacia la asamblea y una visin sin obstculos de esta ltima hacia el sacerdote; este aspecto,
146
147
381
as como el cierre de los muros laterales hacia el presbiterio con la intencin de orientar las visuales hacia el mismo, se constituyeron en planteamientos inditos en la construccin de iglesias
en Yucatn. El sistema constructivo empleado, mixto, a base de columnas metlicas, trabes de
concreto, muros de block hueco de concreto y losa de diente de sierra de concreto colada en
sitio, dej ver un rompimiento con los sistemas tradicionales.
El criterio de colocacin de las losas de diente de sierra seguramente obedeci a dos aspectos,
por un lado el arquitecto consider mostrar en fachada el perfil de las losas de diente de sierra,
seguramente como smbolo de modernidad, pues se prolongan como parte de la fachada principal; y por otro lado, las coloc de forma ascendente de los extremos hacia el centro para formar
una bveda, y demostrar que an con los materiales y tcnicas nuevas se poda lograr una
forma cargada de tradicin. El muro del frente de la iglesia que recibe la losa de dientes de sierra
se estructur con columnas metlicas y trabes de concreto, enmarcando el plano longitudinal
transparente hecho a base de celosas de concreto, lo que permiti, por un lado, el acceso de
iluminacin natural a la nave, y por otro, tamizar el sol que se recibe del poniente; una remodelacin posterior recubri las columnas metlicas por concreto e interrumpi el plano limpio de
celosa en fachada. El esbelto elemento vertical del campanario, separado de la nave, sustituy a
las tradicionales torres adosadas y se remat con la cruz formada por lneas.
En este templo se pudo apreciar la aceptacin del nuevo lenguaje, sistema constructivo y planteamiento espacial. Por el discurso emitido por el promotor (en este caso el prroco), son evidentes algunas intenciones, a decir de Juan Plazaola, de un ensayo de renovacin y de fidelidad
a la tcnica moderna,148 al plantear una intencin clara de acercar a los fieles al altar, y de
tener un dominio sobre la atencin de los mismos, lo que se logr con el esquema planteado;
a diferencia de los esquemas alargados longitudinales, en este caso se acort el camino hacia
el altar y se dirigi mediante el cierre de los lmites laterales con la inclinacin de stos; estos
aspectos, junto con el empleo de una tecnologa nueva, por sus posibilidades estructurales y
expresividad formal, hacen que se pueda considerar como el primer caso de arquitectura religiosa moderna. Fig. 95 y 96
148
382
149
Elvia Mara Gonzlez Canto, entrevista a la decoradora Beatriz Moreno de Manero, colaboradora del arquitecto
Enrique Manero Pen; 4 de junio de 2008.
383
La expresin formal fue resultado del sistema constructivo empleado; una estructura portante que
const de cinco grandes trabes de concreto armado, niveladas y visibles, que libraban el claro en
forma de arcos y que soportaban la cubierta de losa armada;150 el perfil resultante en fachada fue
un reflejo de dicha estructura; un gran arco en cuyo tmpano se ubic una serie de columnas y
trabes de concreto formando cuadros recubiertos con celosas de concreto huecas que permitan
pasar la luz y el aire del norte, orientacin de la fachada.
La planta se proyect de forma rectangular, de 30 metros de ancho y 25 metros de profundidad,
aunque slo se construy con una profundidad de 20 metros, por lo que el esquema planteado si
bien acercaba visualmente a los fieles hacia el rea del presbiterio el ancho no permita la visual
directa hacia ste. La dimensin de la nave seguramente fue la ms amplia hasta entonces lograda en estos recintos, y se dise para albergar a mil feligreses. Fig. 97 y 98
De manera similar al proyecto del Santo Nio de Atocha, a la izquierda y separado de la nave, se
construy un alto elemento que sirve de campanario y que se remata con una cruz de concreto,
cuyo diseo plstico y formal denotan una expresividad nueva.
Fig. 97 Santuario del Sagrado Corazn de Jess, Col.
Alemn. 1962. Arq. Enrique
Manero Pen.
Fig. 98 Interior santuario
del Sagrado Corazn de
Jess, Col. Alemn.
150
Elvia Mara Gonzlez Canto, entrevista a la decoradora Beatriz Moreno de Manero, colaboradora del arquitecto
Enrique Manero Pen, el 4 de junio de 2008, en donde manifest que el sistema estructural empleado result en ese
momento econmicamente viable ya que permiti la construccin por tramos, secciones de losa armada, apoyados
en los arcos de las trabes.
384
385
151
Elvia Mara Gonzlez Canto, entrevista al ingeniero Mario Duarte Carrillo, autor y constructor del proyecto, el
28 de julio de 2008.
386
387
La plstica de la forma se enriqueci por la utilizacin de la piedra de la regin en los elementos estructurales verticales y en el altar; la techumbre con un ligero acento ascendente se
resuelve con casetones recubiertos con madera; los que se interrumpen arriba del altar por un
crculo levantado por el cual ingresa luz y desde el cual cuelgan las lmparas destacando el
rea del altar.
Sobresale la solucin de varios sistemas constructivos que se utilizaron en el resto del conjunto:
en pasillos de acceso y reas contiguas se us el techo canal, la trabelosa y la losa armada sustentada por marcos metlicos. Sin duda alguna es en este recinto en donde se hace un alarde
estructural que denota una incursin de lleno a los privilegios de los adelantos tecnolgicos en
materia de presforzados,152 as mismo, en lo que respecta al diseo espacial, formal y funcional,
152
El ingeniero Mario Duarte Carrillo, en el ao de 1960, instal la primera fbrica de elementos presforzados e
introdujo el sistema de vigueta y bovedilla, y utiliz este sistema por primera vez en Mrida; al ao siguiente, en 1961,
comenz a producir en forma industrializada losas prefabricadas de techo, como la trabelosa; en 1963 dise una seccin de techo canal U invertida y cre su proceso industrial de concreto presforzado. Informacin en lnea direccin
URL: http:// www.pretechos.com/chc.pdf, consultada el 5 de junio de 2007. Tambin, en: Elvia Mara Gonzlez Canto,
entrevista al ingeniero Mario Duarte Carrillo, autor y constructor del proyecto, el 28 de julio de 2008.
388
se lograron sintetizar algunos de los conceptos de diseo que la Liturgia vena planteando desde
haca varias dcadas en Mxico como antecedente al Concilio Vaticano II.153 Fig. 103 y 104
153
En el ao de 1962, despus de la celebracin del Concilio Vaticano II, se emiti el Sacrosantum Concilium, que
planteaba una serie de disposiciones relativas al diseo de los templos catlicos, la ubicacin de las distintas partes
del mismo de acuerdo con la Liturgia y su simbolismo. Una sntesis de stos son: 1. Libertad de estilos artsticos: La
Iglesia no consider como propio ningn estilo artstico, sino que acept los estilos de cada poca... Tambin el arte de
nuestro tiempo y de todos los pueblos y regiones deben ejercerse libremente en la Iglesia (Vaticano II, Sacrosanctum
Concilium, 123).
2. Aptitud para una liturgia comunitaria: Que sean idneos para seguir las acciones litrgicas y lograr la participacin activa de los fieles (Vaticano II, Sacrosanctum Concilium, 124).
3. Capacidad simblica: Los edificios sagrados que pertenecen al culto divino sean, en verdad, dignos y bellos,
signos y smbolos de las realidades celestiales (Ordenacin General del Misal Romano, 253; cf. Vaticano II, Sacrosanctum Concilium, 122-124).
4. Sencillez y autenticidad: La ornamentacin de la iglesia ha de tener una noble sencillez ms que una pomposa
ostentacin. Y en la eleccin de los materiales ornamentales, procrese la autenticidad para que contribuyan a la
formacin de los fieles y a la dignidad de todo el lugar sagrado (Ordenacin General del Misal Romano, 279; cf.
Vaticano II, Sacrosanctum Concilium, 124).
5. Comodidad: Que se prevean, adems, todas las circunstancias que ayudan a la comodidad de los fieles, lo mismo
que se tienen en cuenta en los sitios normales de reunin (Ordenacin General del Misal Romano, 280).
6. Casa abierta y acogedora: La Iglesia visible simboliza la casa paterna hacia la cual el pueblo de Dios est en
marcha y donde el Padre enjugar toda lgrima de sus ojos (Ap 21,4). Por eso tambin la Iglesia es la casa de todos
los hijos de Dios, ampliamente abierta y acogedora (Catecismo de la Iglesia Catlica, 1186).
7. Reforma de los edificios existentes: Corrjase o suprmase todo lo que parezca menos conforme con la liturgia
reformada; consrvese o introdzcase lo que la favorezca (Vaticano II, Sacrosanctum Concilium, 128). As mismo, se
plante las consideraciones que tiene que ver con la disposicin de los distintos elementos: altar, sede, ambn, lugar
de los fieles y capilla del Santsimo Sacramento. En Miguel Paya Andrs, El lugar de la fiesta, en lnea direccin URL:
www.franciscanos.org/temas/banquete5.htm, consultada el 28 de enero de 2008, 17: 45 horas.
389
esta forma triangular y pura en su geometra, con su campanario exento, ya no pareca ajena a
los nuevos lenguajes que se haban estado utilizando en los templos catlicos. Fig. 105
Se pudo concluir que fue en esta dcada cuando se dio la modernizacin de los templos catlicos, los agentes modernizadores fueron los nuevos profesionistas que se incorporaron tanto
del campo de la arquitectura como de la ingeniera, as como la inclusin de nuevos sistemas
constructivos que fueron decisivos en la gnesis y desarrollo de esta arquitectura; y las nuevas
espacialidades fueron fundamentalmente resultado de los nuevos sistemas constructivos, por
lo que se puede afirmar que la habilidad y sensibilidad del proyectista fue lo que marc una
diferencia, no slo en el lenguaje formal, propio de la arquitectura moderna, sino en la concepcin espacial.
Al respecto de la renovacin de la Iglesia catlica, consignada en el Sacrosanctum Concilium,
producto del Concilio Vaticano II, no fue posible constatar que los intentos de renovacin fueron
una consecuencia directa de stos, ms bien se concluy que fueron producto de reflexiones y
muy probablemente del conocimiento de cambios en otras partes del pas y del mundo.
390
Los factores que determinaron la construccin de los templos catlicos en la dcada de los
cuarenta obedeci, de manera tarda, al llamado modus vivendi establecido entre el Estado y la
Iglesia catlica; en la dcada de los cincuenta, el incremento poblacional drstico que se haba
suscitado en la dcada anterior, las nuevas colonias al norte, Mxico, Alemn y Garca Giners,
entre otras, se empezaron a poblar en esos aos; fue lo que propici un reacomodo en las delimitaciones parroquiales y en consecuencia en la demanda de nuevos templos, que se planearon
a finales de los cincuenta y se construyeron en la siguiente dcada.
Los lenguajes formales empleados en la dcada de los cuarenta respondieron predominantemente al movimiento nacionalista iniciado en los aos veinte, en la ciudad de Mxico y que en
Yucatn en especial para el gnero habitacional se va a prolongar hasta la dcada de los
cincuenta, siendo el neocolonial el predilecto; esta manifestacin formal se constituy en esa
dcada como signo de modernidad, frente a las expresiones formales tradicionales de la Colonia
no as en lo ideolgico los esquemas empleados respondieron a la tradicin catlica y no
incorporaron cambios.
Fue en la dcada de los cincuenta cuando se dio la primera manifestacin de modernismo, propio de las formas del movimiento moderno, en el caso de la Sagrada Familia, sin embargo, este
cambio slo se present en la expresin formal, en lo referente a los esquemas y la espacialidad
del templo no hubo cambios. La dcada de los cincuenta se constituy como el comps de espera entre el advenimiento de nuevos profesionales al medio, que llegan a finales de los cincuenta,
y la produccin arquitectnica que en ese perodo fue escasa.
En la dcada de los sesenta lleg la modernizacin del templo catlico, pero sta fue predominantemente por el sistema constructivo empleado, y la espacialidad del templo fue resultado del
mismo, situacin que se present en todos los casos estudiados.
En relacin con la solucin del programa arquitectnico, se incorporaron algunos cambios que
no lograron ser significativos, con excepcin del templo de la Santsima Trinidad, de Flix Mier y
Tern, y la capilla de la Casa de la Cristiandad, de Fernando Lpez Escalante.
391
El agente modernizador ms importante de la dcada de los cuarenta fue el arquitecto Carlos Castillo Montes de Oca, ya que introdujo al gnero religioso el estilo neocolonial, una modernidad
en contraste con las formas eclcticas y coloniales. En la dcada de los cincuenta el arquitecto
Enrique Manero Pen fue el primero que moderniz el templo catlico, aunque slo lo hizo en
su expresin formal. En la dcada de los sesenta fueron los arquitectos y los ingenieros los principales agentes modernizadores, ya que introdujeron e incorporaron sus conocimientos tcnicos
al proceso de diseo; destac de este grupo el ingeniero Mario Duarte Carrillo, pionero en los
sistemas prefabricados.
Durante la dcada de los cuarenta y los cincuenta poco o nada tuvieron que ver los motivos
ideolgicos del clero con la formas resultantes; en la dcada de los sesenta se conjugaron los motivos ideolgicos del espritu de una poca de modernizacin tecnolgica con la ideologa de lo
contenido en el Concilio Vaticano II, que fue interpretado en mayor o menor grado, dependiendo
de las habilidades del proyectista.
La expresividad en el templo catlico en la dcada de los sesenta se dio fundamentalmente por
el sistema construido empleado, y la espacialidad se debi bsicamente a este aspecto. En los
templos diseados por el ingeniero Mario Duarte Carrillo, l utiliz un elemento prefabricado
que l mismo produca en su fbrica, el techo canal, y el espacio en forma de U invertida de
San Judas Tadeo y el gran claro del templo de la Santsima Trinidad fueron producto del elemento estructural.
392
CONCLUSIONES
Los anlisis realizados permitieron comprobar o hacer precisiones ms exactas de las hiptesis
que guiaron el desarrollo de la investigacin, contestar las preguntas formuladas y alcanzar los
objetivos planteados; sin embargo, lo encontrado no se ci exactamente a un nico resultado
ya que lo hallado aport ms conocimientos para concretar lo anterior.
Como respuesta a la hiptesis que estableci que el proceso modernizador de la arquitectura
moderna de uso colectivo y de la ciudad de Mrida en las dcadas del cuarenta al setenta se dio
a travs del Estado va polticas gubernamentales modernizadoras de bienestar social, y la iniciativa privada con fines de desarrollo econmico, se encontraron tres momentos en coincidencia
con las dcadas estudiadas.
El proceso modernizador de la ciudad de Mrida se inici en la dcada de los aos cuarenta y
las acciones que evidenciaron esto fueron en dos sentidos: en el plano urbano y en el arquitectnico; las acciones que se realizaron y que permiten afirmarlo fueron las siguientes:
En el plano urbano; con la finalidad de abatir el problema de vivienda que el pas y la ciudad
tena, se emprendieron por parte del Estado en diferentes niveles de gobierno tres acciones: la
creacin de las colonias Mxico, Pensiones y Miguel Alemn; en las dos ltimas, producto inversiones de recursos federales a Yucatn, se registraron las primeras acciones modernizadoras en
materia de salud e higiene al proyectarse las nuevas reas habitacionales con servicios de agua
potable y drenaje, mismos con los que ninguna de las colonias de la ciudad contaba, aspecto
que no fue contemplado para el desarrollo habitacional promovido por el gobierno del estado.
En el caso de la colonia Miguel Alemn, la tendencia a conseguir mejores condiciones climticas
los llev a la modificacin de la traza tradicional, inclinando sta para la captacin de los vientos
ms favorables.
Las colonias Pensiones y Miguel Alemn fueron realizadas con inversiones federales, las primeras
incluyeron su propio servicio de alumbrado y agua potable, lo que sin duda reflej la tendencia
393
modernizadora de dotar a las viviendas con servicios que garantizaran un mayor bienestar social;
no as en relacin con la dotacin de equipamientos.
Respecto a la dotacin del equipamiento, fueron las colonias Miguel Alemn y Mxico las que
se proyectaron con reas destinadas a este fin; en el primer caso dejando un rea de donacin, y
para el segundo, especificando puntualmente los equipamientos a incluir y su ubicacin, aspecto
que sobresali como un hecho indito ya que esto no era habitual; los equipamientos propuestos
denotaron la intencin de dotar a la colonia en los rubros de cultura y recreacin (cine, teatro,
casino y parque), educacin (biblioteca, escuela y talleres de artes y oficios), comercio (mercado), y trabajo (pequeas industrias). Sin embargo, lo proyectado no se cumpli, ni las viviendas
llegaron a los habitantes para las que fueron proyectadas ni se dot del equipamiento prometido;
en lo anterior slo la colonia Miguel Alemn lo logr, pero fue a partir de finales de la dcada de
los aos cincuenta y durante los sesenta.
Los aspectos relacionados con la comunicacin entre las distintas zonas de la ciudad no fueron
aspectos planificados, ante la ausencia de un plan regulador y la indiferencia de la nueva Ley de
Planificacin de la Ciudad de Mrida (1945) que establecera soluciones en torno de necesidades
de comodidad, higiene, economa y esttica de la vida de los habitantes.
Las acciones emprendidas por la iniciativa privada no contemplaron ninguno de los aspectos anteriormente mencionados; en lo relativo a la construccin de obras de arquitectura, no se introdujo nada innovador y se continu con los nacionalismos y el art-dco que no present ninguna
innovacin tcnica, funcional o espacialidad nueva.
En relacin con las acciones puntuales de dotacin de equipamiento para toda la ciudad, se realizaron en los rubros de salud y educacin, como consecuencia de los planes nacionales; stos
motivaron la construccin del Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto por parte del Estado y
la red hospitalaria de Henequeneros de Yucatn, inversin del Estado e iniciativa privada; y en el
rubro del comercio, la construccin del mercado municipal.
394
modernizadora y el poder econmico de la iniciativa privada; en consecuencia, aparecieron nuevos cdigos arquitectnicos en varios edificios en donde se manifest la propuesta formal como
resultado de la tcnica y la funcin, as como una nueva espacialidad al establecer fluencias visuales entre el interior y el exterior, posibilitadas por los nuevos materiales y sistemas constructivos.
Por su parte el Estado construy dos obras en donde tambin dej ver su intencin modernizadora, siempre dentro de los planes posrevolucionarios de modernizacin hospitalaria y comercial (mercado); del primer rubro hizo su aparicin el Centro de Salud (1958), del Sistema de
Salubridad y Asistencia, e implant un edificio con cdigos arquitectnicos institucionalizados,
ya probados en otras partes del pas; con un evidente lenguaje, funcionamiento, espacialidad y
tcnica propia de la arquitectura moderna, y por otro lado, incursion en el mercado de Santa
Ana con un novedoso sistema constructivo de paraguas invertidos. En estos casos, en el primero
fue la federacin a travs de sus instituciones los que implantaron esa arquitectura; en el segundo
fue la accin de un profesionista local al servicio del Estado.
El proceso de la descentralizacin de funciones del centro de la ciudad y la intencin de consolidacin y expansin hacia el norte de la misma se manifest claramente con diversas acciones;
en el plano arquitectnico la gran mayora de las acciones no significaron la inclusin de los
cdigos de la arquitectura, a diferencia de lo ocurrido en el centro. Esta expansin, por un lado,
inici la conformacin de zonas de desarrollo de equipamientos colectivos, tanto pblicos como
privados, en cumplimiento con lo planteado por Fourquet y Murard, en tanto los equipamientos
originarios son generadores del brote de otros adyacentes o perifricos. Las zonas fueron para el
equipamiento de salud: el centro y la avenida Itzaes; la zona de El Fnix para el equipamiento
educativo; y por otro, la consolidacin de las reas habitacionales que para ese momento ya
se consideraban como zonas residenciales, por lo que el equipamiento educativo a cargo de la
iniciativa privada reforz esta intencin. Este hecho, robustecido por la reconstruccin de vas
que enlazaban algunas de las colonias Miguel Alemn, Pensiones, prolongacin del Paseo de
Montejo, Buenavista y Mxico Oriente, estas tres ltimas en franca consolidacin como sede de
viviendas residenciales para personas de alto poder adquisitivo. Lo anterior puso en evidencia la
influencia del poder econmico sobre el del Estado.
396
Otro aspecto fundamental en el proceso de la evolucin de la arquitectura moderna fue la llegada y el egreso de la Facultad de Ingeniera local de nuevos profesionales al medio.
La modernizacin de la ciudad a travs de la planificacin de la ciudad mediante la creacin de
instrumentos de planeacin no se logr; fueron infructuosas las gestiones realizadas por diferentes vas: del Estado a travs de la Junta de Mejoramiento Cvico y Material, creada en 1952, para
la ciudad Mrida; el Departamento de Obras Pblicas Municipales encabezado en 1952 por el
arquitecto Tommasi Lpez; el Plan Regulador para la ciudad de Mrida presentado en 1953, encargado a especialistas de la ciudad de Mxico; y profesionistas que, a ttulo personal, o a travs
de las asociaciones gremiales, denunciaron y demandaron: acabar con las deficiencias en la ciudad, una solucin ordenada al crecimiento, dotacin de servicios de infraestructura, ingeniera
sanitaria, urbanizaciones en las colonias, planeacin y dotacin de servicios pblicos, trasporte
y equipamientos equilibrados, entre otros.
Los aspectos relativos a la higiene, coadyuvantes y fundamentales para la modernizacin y el
desarrollo de una sociedad, no pudieron lograr su materializacin a travs de las obras de infraestructura satisfactoriamente; tan slo se avanz en el camino modernizador en lo relativo a
la dotacin de energa elctrica para la iluminacin de parques, avenidas y monumentos, ms
all del centro de la ciudad, ya que las obras de introduccin de agua potable y drenaje no se
concretaron, slo se quedaron en planes.
En la dcada de los sesenta, ante la profunda crisis de la agroindustria, el intervencionismo
estatal asumi dos caminos: por un lado incentiv la constitucin de monopolios privados, y
por otro contribuy a la diversificacin econmica. En este sentido el Estado dirigi sus acciones hacia la conformacin de empresas paraestatales; el financiamiento agropecuario ejidal,
y estimul las inversiones privadas, fuera de la agroindustria, mediante financiamiento y obras
de infraestructura. En consecuencia, se fusionaron el capital privado y estatal de la industria
del henequn y particularmente las cordeleras, que en 1964 pasaron a manos del Estado. Con
el capital, producto de esa transaccin, la iniciativa privada busc nuevas fuentes de acumulacin y una diversificacin de actividades econmicas, que desde la dcada anterior ya se
397
haban prefigurado, lo que dio como resultado que la ciudad se consolidara como prestadora
de servicios.
Se realizaron importantes obras de arquitectura para el uso de la industria refresquera, alimenticia, materiales de construccin, entre otras; la banca y el comercio fueron sin duda las principales dentro del rubro de la economa. En el grupo de los servicios, los de salud y de educacin
lograron su consolidacin tanto por parte del Estado con inversiones federales, as como por la
iniciativa privada, y se realizaron acciones considerables hacia la consolidacin de la industria
hotelera, con inversiones en el centro de la ciudad. Las acciones ms importantes en el rubro de
salud y educacin que realiz el Estado fueron inversiones federales y los modelos de arquitectura moderna empleados fueron los ya probados en otras regiones institucionalizadas, con cdigos
arquitectnicos establecidos que por lo general slo permitieron cambios mnimos.
En el plano urbano se suscitaron varios comportamientos: a) se consolid el centro de la ciudad
como prestador de servicios, b) se consolidaron zonas de equipamiento que haban iniciado esa
tendencia en las dcadas anteriores: para el equipamiento de salud la avenida Itzaes y el rea
noroeste de la ciudad; para los equipamiento educativos y de salud la zona de El Fnix; para las
agencias de autos, oficinas para la administracin pblica, industrias refresqueras, entre otros, la
salida hacia la ciudad de Campeche; en la avenida Paseo de Montejo se inici la expansin de
servicios, entre los que destacaron los bancarios, y en la salida hacia el puerto de Progreso, con
el Instituto Tecnolgico y la creacin de la paraestatal Cordemex, se configur un corredor con
variados servicios. Un comportamiento por dems evidente, fue la concentracin del equipamiento de todos los gneros en el centro y en la zona norte de la ciudad.
Aunado a este desarrollo se concret la modernizacin de la ciudad con la introduccin del
servicio de agua potable y electrificacin; y en el plano urbano, el surgimiento de las reas habitacionales ms importantes por el nmero de acciones realizadas, que se hicieron atendiendo las
recomendaciones de dotarlas de los equipamientos, servicios y vas de comunicacin necesarias;
estas acciones promovidas tanto por la iniciativa privada como por el Estado fueron proyectadas
por arquitectos locales. Es de destacar la Unidad Habitacional Cordemex ya que se cre como
398
apoyo al complejo industrial del mismo nombre, en el mismo sitio; por primera vez se llev a
cabo una accin de dotar de viviendas y equipamientos a los obreros de la industria. Estas acciones, se dieron al margen de la nueva Ley de Planificacin del Estado, que no se concret en
ningn instrumento de planificacin normativa; estos se concretaron al inicio de la dcada de
los setenta.
Hay que sealar que cuando el Estado emprendi obras urbanas de modernizacin con el fin
de abatir el problema de vivienda no se lograron los objetivos planteados; los conjuntos habitacionales que se proyectaron no llegaron a las clases sociales a las que se destinaron; no se dot
del equipamiento necesario y cuando se hizo fue en beneficio de otro grupo social diferente
al que se le destin originalmente; slo cuando la accin urbanizadora tuvo como objetivo
primordial coadyuvar para el mejoramiento de los intereses econmicos del Estado, el objetivo
se cumpli.
Para dar respuesta a la segunda hiptesis, en la que se propuso que los agentes modernizadores
de la arquitectura y el urbanismo moderno en Mrida fueron el Estado a travs de sus arquitectos,
con modelos trados del centro del pas; los empresarios y profesionistas del medio, formados en
Mrida, en el extranjero y en la ciudad de Mxico, y los medios masivos de comunicacin, se
pudo comprobar que tal situacin no fue homognea para todas las dcadas de estudio.
En la dcada de los cuarenta fue el Estado el agente modernizador ms importante, a travs de
los arquitectos de la ciudad de Mxico y los locales.
Sin embargo, esta situacin fue parcial en ambos casos, ya que en la construccin de la colonia
Alemn en donde se incorpor un proyecto elaborado por los arquitectos del compaa Latinoamericana de la ciudad de Mxico, de la propuesta de diseo prevalecieron dos aspectos que
fueron los motivos principales del rechazo: en la construccin de las viviendas se introdujo un
sistema constructivo de tabiques de concreto en los muros que, al ser ajenos a la regin, tamao
y espesor delgados, origin desconfianza por la sensacin de inseguridad que transmitan; por
otro lado, suscit la necesidad de armar en el sitio una planta para su construccin; cuando esta
399
tecnologa se retir del sitio no se volvi a utilizar. El segundo aspecto fue la propuesta de casas
duplex, modelo utilizado en la ciudad de Mxico, en donde haba fuertes presiones por el suelo,
lo que no haba en la ciudad de Mrida.
Los agentes modernizadores locales fueron Manuel y Max Ambilis, quienes construyeron el
Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto y lograron una modernizacin parcial al resolver el
programa arquitectnico en donde se cumpli el principio fundamental de la arquitectura moderna, la forma sigue a la funcin, ya que fue la expresividad y espacialidad producto de la solucin funcional lineal utilizada; sin embargo, la solucin de los aspectos climticos no fueron
atendidos satisfactoriamente y en lo tcnico no se introdujeron cambios significativos.
El otro agente modernizador fue el arquitecto Carlos Castillo Montes de Oca y asociados en su
papel de la intelligentsia que desarrollaron y aplicaron un proceso tecnolgico nuevo al implementar un sistema constructivo de dalas y cerramientos de concreto armado y block vibrado, que
no logr afianzarse en el medio, por lo que al igual que con el sistema de muros de la casas de
la colonia Miguel Alemn, cuando fueron retirados del medio se perdi; as se cumpli lo que
plante Carlota Sol respecto al desarrollo y aplicacin de la ciencia y la tecnologa a la vida
prctica del hombre, que no implica necesariamente su asimilacin, reforzando esta misma idea
Guillermo Bonfil Batalla en cuanto al comportamiento de la cultura impuesta. Esto lo evidenciaron las mltiples construcciones que se siguieron haciendo hasta finales de la dcada de los
cincuenta con muros de mampostera.
Los agentes modernizadores de la dcada de los cincuenta fueron los nuevos profesionales y los
medios de comunicacin, especficamente el peridico.
La llegada de profesionales de otros lugares y el egreso de la Facultad de Ingeniera Civil de
nuevos profesionales constituyeron el aspecto ms importante para la conformacin de un nuevo grupo de agentes modernizadores, que tanto el Estado como la iniciativa privada emplearon
indistintamente, lo que trajo en consecuencia que la calidad de las obras al margen del promotor se desarrollaran de acuerdo con las habilidades de los proyectistas; que si bien la mayora
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401
En los aos sesenta los agentes modernizadores fueron bsicamente dos: los profesionales de las
dependencias federales encargados de la ejecucin de obras, con modelos institucionalizados
trados del centro y probados como portadores de smbolos de bienestar social y familiar para las
acciones de salud y educacin; y los arquitectos e ingenieros locales casi en su totalidad que
hicieron las obras del gobierno local y de la iniciativa privada.
Los modelos institucionalizados fueron trados al estado y fueron un grupo de elementos arquitectnicos que se impusieron como impresiones visuales de comunicacin de la arquitectura,
que por un lado simbolizaban el papel del Estado protector y dador de bienestar para la salud y
educacin del pueblo; y por otro comunicaban un mensaje de modernidad. Para la configuracin del conjunto arquitectnico, definido por el grupo de proyectistas de las dependencias de
gobierno de la ciudad de Mxico, emplearon para lograr una concepcin simblica, un nmero
limitado de elementos arquitectnicos que fueron muy efectivos: volmenes alargados con grandes superficies de celosas, losas delgadas, frontones pesados con el logotipo institucional, esquemas pabellonales comunicados entre s por corredores sostenidos por columnas, entre otros.
En esta situacin se estableci una relacin etnocentrista entre la capital del pas y Yucatn.
Del grupo numeroso de profesionales, con predominio en los ingenieros, se pudo identificar a
los agentes modernizadores ms importantes que realizaron la mayora de las obras de relevancia y repercusin econmica o social, en las cuales se incorporaron los cdigos arquitectnicos
expresivos, funcionales, espaciales y nuevos sistemas constructivos con elementos prefabricados
industrializados. Este grupo lo conformaron: el arquitecto Flix Mier y Tern Lejeune, asociado
con el ingeniero Franz R. Fortuny Cepeda; el arquitecto Fernando Garca Ponce, en sociedad con
los ingenieros lvaro Ponce Pen y Ulises Gonzlez Torre; el arquitecto Fernando Lpez Escalante, asociado con el ingeniero Agustn Pen de Regil; y el ingeniero Mario Duarte Carrillo, quien
trabaj muchas veces solo o en asociacin con otros profesionales.
Con excepcin del ingeniero Mario Duarte Carrillo, quien tuvo una relevancia primordialmente
por la inclusin de los sistemas constructivos industrializados, en todos los dems casos fueron
las asociaciones de arquitectos e ingenieros los que hicieron posible la nueva arquitectura.
402
Fue fundamental la asociacin entre los ingenieros lvaro Ponce Pen y Ulises Gonzlez Torre
que trabajaban juntos desde la dcada de los cincuenta con el arquitecto Fernando Garca
Ponce, quien realiz estudios de arquitectura en la UNAM y se desarroll como pintor. De esta
sociedad resultaron obras de gran calidad en el diseo y los aspectos constructivos; en ellas se
incorporaron todos los cdigos de la arquitectura moderna con tendencias puristas. A esta asociacin hay que vincularla necesariamente con los promotores de un nmero muy importante
de sus obras, la antigua familia Ponce G. Cantn, que hizo su fortuna fuera y dentro de la agroindustria, de donde provenan dos de los profesionales.
El arquitecto Flix Mier y Tern Lejeune trabaj durante sus aos ms prolficos siempre en sociedad con el ingeniero Franz R. Fortuny Cepeda, y juntos realizaron una arquitectura en la que
se logr un resultado con una fuerza expresiva propia de los modernismos de la arquitectura
moderna. Con gran riqueza espacial y expresiva, el arquitecto Mier y Tern fue polifactico y se
desarroll dentro de la tendencia purista y orgnica; a finales de la dcada de los sesenta inici
el retorno a los regionalismos a un nuevo colonial, en el gnero habitacional.
El arquitecto Fernando Lpez Escalante siempre trabaj en sociedad con el ingeniero Agustn Pen
de Regil; ambos egresados del Instituto Tecnolgico de Monterrey, desarrollaron obras en donde
adems de la calidad de la composicin y el lenguaje purista empleado, destacaron por la inclusin
de sistemas constructivos prefabricados industrializados y soluciones tecnolgicas complejas.
La relevancia del ingeniero Mario Duarte Carrillo estuvo ms all de sus obras, fue el desarrollo
de los sistemas constructivos prefabricados industrializados uno de los aspectos fundamentales
de la gnesis del movimiento moderno su aportacin ms importante; introdujo la fabricacin
y el uso de elementos presforzados y pretenzados; el sistema de vigueta y bovedilla, travelosas,
losas doble T, losa canal y la fbrica de concreto premezclado; elementos que cambiaron el
modo de construir y las caractersticas espaciales.
En relacin con la transmisin del poder en la arquitectura, su materializacin y las estrategias empleadas para su consecucin, se pudieron reconocer a lo largo del estudio diversas manifestaciones
403
que buscaban legitimar las intenciones modernizadoras y los variados proyectistas lo expresaron
de acuerdo con sus posibilidades personales; sin embargo, fue en cuatro hechos en donde se pudo
identificar de manera ms clara la intencin:
Por parte de la iniciativa privada (poder econmico) sin duda fue en la utilizacin de un mismo
equipo de profesionales provenientes de la familia Ponce G. Cantn, en donde se utiliz la misma
tendencia arquitectnica como smbolo de poder econmico y modernidad. En la configuracin
de los conjuntos obras para lograr esa concepcin simblica manejaron el mismo lenguaje
que caracteriz la obra del arquitecto Fernando Garca Ponce, un lenguaje compuesto por lneas,
planos y volmenes de expresin purista, que haca evidente una clara influencia neoplasticista,
dentro de la postura pictrica. En relacin al espacio tambin utiliz un solo lenguaje, resultado
de la planta libre, ms o menos rico, el cual se subordin fuertemente al lenguaje formal, donde
prevalecieron las transparencias y las fluencias espaciales; ambos aspectos resultado de las soluciones estructurales planteadas.
La inclusin de los elementos estructurales adems de que signific un cambio en la concepcin
espacial de la arquitectura, al permitir grandes claros, rapidez y economa en la obra, tambin
se constituy como el elemento estratgico de transmisin del poder en la arquitectura, por el
manejo de elementos con un alto grado de significacin modernizadora: el dominio de la tcnica. Produjo en consecuencia la generalizacin de la utilizacin de la trabelosa para todo tipo de
usos: bodegas, fbricas, iglesias, mercados, talleres y escuelas; el gnero no import, las cualidades estructurales, plsticas y expresivas y el significado simblico es lo que la hacan atractiva.
De la obra realizada por el poder poltico del Estado local, no fue posible lograr una identificacin clara con respecto de los proyectistas aspecto que, por el contrario, s se dio durante el
periodo nacionalista con la arquitectura neomaya-la adjudicacin de las obras y los proyectistas
contratados obedecieron a circunstancias diversas (concurso, adjudicaciones directas y otros) y
no por la idea de concebirlas como una estrategia poltica que fuera ms all del uso proporcionado; en consecuencia, el resultado fue lo que el proyectista pudo ofrecer por sus cualidades
como diseador.
404
Con referencia a las obras institucionales con inversiones federales, especficamente en los rubros de salud y educacin, se usaron formas, funcionamientos, espacialidades, y tcnicas ya
catalogadas y probadas; a Yucatn este tipo de obras lleg hasta la dcada de los sesenta, cuando
en el resto del pas haca mucho tiempo que se haban implantado.
La tercera y ltima hiptesis que estableci que la arquitectura moderna de uso colectivo, pblica y privada, utiliz nuevos lenguajes y esquemas compositivos como portadores de la ideologa del Estado e iniciativa privada poderes poltico y econmico inherentes a la idea de
modernidad imperante en el pas, se contest fundamentalmente con los anlisis realizados a los
gneros de salud, educacin y religin.
En el gnero de salud, en el discurso encontrado en todas las dcadas estudiadas se mantuvo la
idea de progreso y de cultura, con variaciones de acuerdo al momento ideolgico. Para principios de siglo en el discurso se manejaron los conceptos de cultura, nacin culta, progreso, ciencia, benefactor; en el perodo posrevolucionario con el movimiento nacionalista surgi de nuevo
el concepto de cultura, pero enfocado a lo regional; en la dcada de los cuarenta se sumaron a
estos conceptos el de la modernidad, con relacin a las exigencias de la higiene; y en los sesenta
aparecieron conceptos que tenan que ver con modernismos, ligados a los nuevos materiales de
construccin e innovaciones tecnolgicas.
En coincidencia con lo anterior, los lenguajes formales empleados en cada perodo respondieron a la ideologa del momento: en los inicios del siglo a las formas eclcticas acadmicas que
proyectaban los ideales de representar al pas como una nacin prospera y civilizada; posteriormente las formas del nacionalismo, necolonial y neomaya como los encargados de preservar
la cultura y los valores mexicanos, y del art-dco como portador de la idea de modernidad y
la esperanza de un futuro, portadores de una identidad nacional; la dcada de los cincuenta
se puede considerar como la preparatoria para lo nuevo, para lo moderno, en funcin de este
comportamiento slo se respondi a la moda del momento, el art-dco; y a la preferencia del
autor. Fue hasta llegar a la dcada de los sesenta, cuando los lenguajes utilizados reflejaron la
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modernidad que se viva en todos los mbitos de la vida, en el pas y en Mrida, por lo que tanto
Estado como iniciativa privada confluyeron en un solo camino, con sus diferencias.
El Estado en la dcada de los sesenta incorpor esquemas y expresiones formales con cdigos
arquitectnicos cargados de un simbolismo, ya probados en otros estados de la Repblica, realizados por las dependencias de gobierno a travs de sus equipos de proyectistas, quienes en la
mayora de los casos se adaptaron a las condiciones climticas del lugar, como consecuencia de
los planes nacionales de salud y educacin iniciados en el resto del pas desde los cuarenta, pero
que a Mrida llegaron en la dcada de los sesenta.
En cuanto a los esquemas planteados, fueron los mdicos, poseedores del saber, agentes definitorios en la arquitectura; las formas empleadas se convirtieron en expresiones de poder, generadas
por ese saber; en consecuencia, el Estado y la iniciativa privada utilizaron el saber de los mdicos
para llevar a cabo su misin social y la imagen que queran legitimar.
Las tipologas arquitectnicas producto de los saberes mdicos, implantadas por las nuevas teoras clnicas de principios del siglo XX, no presentaron grandes innovaciones sino hasta la dcada
de los sesenta cuando se introdujeron los esquemas lineales promovidos, por un lado, por las
instituciones del sector salud, directamente de la Ciudad de Mxico, y por otro, por la iniciativa
privada que los introdujo como parte de los nuevos cdigos del movimiento moderno que estaba
utilizando. La solucin de las tipologas generadas a partir del saber-poder de los mdicos, y las
exigencias de control planteadas se cumplieron en menor o mayor grado dependiendo de las
cualidades del proyectista.
En el gnero de educacin, el discurso encontrado en las dcadas de estudio vario entre el estado
protector y los modernismos; en la dcada de los aos cuarenta fue el estado dador de instruccin y cultura a travs de un centro experimental con el Centro Educacional Felipe Carrillo
Puerto y de modernidad al incorporar aspectos funcionales nuevos de acuerdo a la pedagoga
moderna. En la dcada de los aos cincuenta, fueron los modernismos por los materiales empleados en la arquitectura y los aspectos de tipo funcional, ambientales e higinicos, los que
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En el gnero religioso, los factores que motivaron la construccin de los templos catlicos en
la dcada de los cuarenta, obedecieron al llamado modus vivendi establecido entre el Estado y
la Iglesia catlica; en la dcada de los cincuenta, al incremento poblacional drstico suscitado
en la dcada anterior, que propici un replanteamiento en las delimitaciones parroquiales y a
la demanda de nuevos templos que se planearon a finales de los cincuenta y se construyeron
en los sesenta.
En este gnero no se dio abiertamente el discurso ya que ste como tal no existi; las condiciones
polticas entre el Estado y la Iglesia fueron determinantes para ello, si bien el llamado modus vivendi posibilit la ereccin de nuevos templos en Yucatn, no as para la difusin de la ideologa;
y aunque, como se vio, existi para la ciudad de Mxico, a Yucatn no lleg sino hasta los sesenta
en la figura del Concilio Vaticano II.
Con respecto de los lenguajes formales empleados en la dcada de los aos cuarenta, se respondi predominantemente, en apariencia, al movimiento nacionalista iniciado en los aos veinte
en la ciudad de Mxico y que en Yucatn en especial para el gnero habitacional se prolong
hasta la dcada de los cincuenta, siendo el neocolonial el predilecto, sin duda alguna nada ms
alejado de los ideales del gobierno posrevolucionario; ste se consider en esa dcada como
signo de modernidad frente a las expresiones formales tradicionales de la Colonia; los esquemas
empleados respondieron a la tradicin catlica y no se incorporaron cambios.
En la dcada de los cincuenta se dio la primera manifestacin de los modernismos propios de
las formas del movimiento moderno en el templo de la Sagrada Familia, este cambio slo se
dio en la expresin formal, no as en lo referente al esquema y la espacialidad; en esta dcada
la produccin arquitectnica fue escasa; en preparacin al ambiente modernizador y al advenimiento de los nuevos profesionistas.
La modernizacin del templo catlico se dio en la dcada de los sesenta, y los motivos que la
propiciaron fueron los nuevos sistemas constructivos; en funcin de stos la espacialidad del
templo se modific y el resultado fue el mismo en todos los templos estudiados. En lo relativo
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a la solucin otorgada por el programa arquitectnico, no hubo cambios significativos, con excepcin del santuario del Santo Nio de Atocha, de Flix Mier y Tern Lejeune, y la capilla de la
Casa de la Cristiandad, de Fernando Lpez Escalante.
Los agentes modernizadores ms importantes fueron profesionistas del medio, con formaciones
diversas; en la dcada de los cuarenta lo fue el arquitecto Carlos Castillo Montes de Oca, quien
estudi Arquitectura en la Universidad de Cornell en Estados Unidos en 1915; l utiliz el estilo
neocolonial, una modernidad en oposicin a las formas eclcticas y coloniales.
En la dcada de los cincuenta el agente modernizador fue el arquitecto Enrique Manero Pen,
egresado de la Escuela Nacional de Arquitectura de la UNAM en 1949; l fue el primero en modernizar el templo catlico, aunque slo en su expresin formal.
En la dcada de los sesenta fueron tanto arquitectos como ingenieros los principales agentes modernizadores que incorporaron sus conocimientos tcnicos al proceso de diseo; en funcin de
ello la expresividad y espacialidad en los templos catlicos fueron resultado fundamentalmente
del sistema constructivo empleado.
De esta dcada destacaron el ingeniero Mario Duarte Carrillo, egresado de la Facultad de Ingeniera de la Universidad Autnoma de Yucatn en 1950, quien utiliz los elementos prefabricados que l produca en su fbrica; el techo canal, que dio como resultado el espacio en forma
de V invertida de San Judas Tadeo y el gran claro del templo de la Santsima Trinidad; y el
arquitecto Fernando Lpez Escalante, egresado del Instituto Tecnolgico de Monterrey, quien
incorpor una gran variedad de sistemas estructurales en la Casa de la Cristiandad, en la que sin
duda alguna logr en la capilla, producto de todos los cdigos arquitectnicos conjugados, un
resultado espacial, formal y expresivo indito y con una muy alta calidad en la composicin.
En relacin con los motivos ideolgicos del clero, durante la dcada de los aos cuarenta y cincuenta poco o nada tuvieron que ver con las formas resultantes; en la dcada de los sesenta confluyeron en un solo sentido los motivos ideolgicos de una poca de modernizacin tecnolgica
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y la ideologa del Concilio Vaticano II, sin embargo los resultados no fueron por ello sino por el
espritu modernizador de la arquitectura.
Reflexin final
La arquitectura estudiada pertenece ya al siglo pasado y si la condicin de la permanencia
o la defensa de los valores pueden definirse por la lejana en el tiempo, quiz el decir esto
pueda significar al menos un reconocimiento y la difusin de sus valores, uno de los objetivos
implcitos de este trabajo. A travs de este estudio se ha podido reconocer una arquitectura que
fue producto de cambios sociales, econmicos y tecnolgicos; en una poca en que se tena una
concepcin particular del mundo.
Ante la prdida y el abandono de este patrimonio, se hace urgente un llamado para su identificacin, anlisis, definicin, valoracin y restauracin; as como a la investigacin de los numerosos nichos de trabajo que de este trabajo se desprenden, entre los que se pueden mencionar: el
estudio detallado de las zonas habitacionales, especialmente de la Unidad Revolucin o Unidad
Habitacional Cordemex, el estudio por gneros especficos: hoteles, agencias bancarias y de
automviles, entre otros; el estudio en particular de los profesionistas con sus diferentes tendencias; profundizar en la relacin entre los agentes modernizadores, Estado e iniciativa privada; y la
relacin entre los hechos en Yucatn y otras regiones del pas, entre otros. Espero que este trabajo
logre incentivar hacia esos caminos.
Una preocupacin importante son las acciones realizadas en el centro de la ciudad, en muchos
de estos equipamientos all alojados; con el afn de alinearlos al paramento perdido, para mimetizarlos con la estructura histrica se les han sobrepuestos paredes en el frente, contribuyendo
a crear una idea falsa, consiguiendo tan slo un fachadismo que no tiene ni el espritu eclctico
acadmico o colonial del tejido histrico de la ciudad, ni la expresin de una poca de modernidad; lo que sin duda alguna no contribuye a la identificacin de la arquitectura, ya que esta debe
y deber ser siempre reflejo de un tiempo y un lugar.
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Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 15 de noviembre de 1953, p. 1, Nm. 9804, ao XXIX,
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Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 1 de enero de 1954, p.18, 1. Seccin, Nm. 9849, ao
XXIX, tomo CXI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 12 de enero de 1954, p. 5, Nm. 9860, ao XXIX, tomo CXI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 13 de enero de 1954, p. 4, Nm. 9861, ao XXIX, tomo CXI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 1 de febrero de 1954, p. 5, Nm. 9880, ao XXIX, tomo CXI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 18 de abril de 1954, p. 3, Nm. 9955, ao XXIX, tomo CXII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 25 de mayo de 1954, p. 7, Nm. 9991, ao XXIX, tomo CXII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 28 de mayo de 1954, p. 4, Nm. 9994, ao XXIX, tomo CXII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 20 de octubre de 1954, p. 9, Nm. 10138, ao XXX,
tomo CXIV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 27 de octubre de 1954, p. 3, Nm. 10145, ao XXX,
tomo CXIV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 9 de febrero de 1955, p. 1, Nm. 10248, ao XXX, tomo CXV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 11 de febrero de 1955, p. 5, Nm. 10250, ao XXX, tomo CXV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 16 de febrero de 1955, p.1, Nm. 10255, ao XXX, tomo CXV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 26 de mayo de 1955, p. 6, Nm. 10352, ao XXX, tomo CXVI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 15 de junio de 1955, p. 4, Nm. 10372, ao XXXI, tomo CXVI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 3 de julio de 1955, p. 6, Nm. 10390, ao XXXI, tomo CXVII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 29 de septiembre de 1955, p.1, Nm. 10477, ao XXXI,
tomo CXVII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 5 de enero de 1956, p. 5, Nm. 10573, ao XXXI, tomo CXIX.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 12 de febrero de 1956, p. 8, Nm. 10611, ao XXXI,
tomo CXIX.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 23 de febrero de 1956, p. 9, Nm. 10622, ao XXXI,
tomo CXIX.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 21 de marzo de 1956, p. 5, Nm. 10649, ao XXXI, tomo CXIX.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 20 de abril de 1956, p. 9, Nm .10678, ao XXXI, tomo CXX.
428
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 24 de abril de 1956, p. 1, Nm. 10682, ao XXXI, tomo CXX.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 12 de mayo de 1956, p. 1, Nm. 10699, ao XXXI, tomo CXX.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 1 de junio de 1956, p.9, Nm. 10719, ao XXXII, tomo CXX.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 15 de julio de 1956, p. 6, Nm. 10763, ao XXXII, tomo CXXI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 20 de octubre de 1956, p. 11 Nm. 10859, ao XXXII,
tomo CXXII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 20 de noviembre de 1956, Nm. 10890, ao XXXII,
tomo CXXII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 31 de enero de 1957, p. 8, Nm. 10960, ao XXXII,
tomo CXXIII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 1 de febrero de 1957, p. 8, Nm. 10961, ao XXXII,
tomo CXXIII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 11 de marzo de 1957, p. 9, Nm. 10999, ao XXXII,
tomo CXXIII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 15 de mayo de 1957, p. 1, Nm. 11062, ao XXXII,
tomo CXXIV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 1 de junio de 1957, p. 1, Nm. 11079, ao XXXIII, tomo CXXIV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 31 de agosto de 1957, p. 1, Nm. 11170, ao XXXIII,
tomo CXXV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 8 de septiembre de 1957, p. 4, Nm. 11178, ao XXXIII,
tomo CXXV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 8 de septiembre de 1957, p. 14, Nm. 11178, ao XXXIII,
tomo CXXV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 1 de febrero de 1958, Nm. 11322, ao XXXIII, tomo CXXVI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 14 de marzo de 1958, p. 6, Nm. 11363, ao XXXIII,
tomo CXXVI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 15 de marzo de 1958, ltima pgina, Nm. 11364, ao
XXIII, tomo CXXVI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 26 de abril de 1958, p. 6, Nm. 11404, ao XXXIII,
tomo CXXVI.
429
430
431
432
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 16 de enero de 1962, ltima plana, Nm. 13179, ao XXXVII, tomo CXLI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 17 de enero de 1962, ltima plana, Nm. 13180, ao XXXVII, tomo CXLI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 18 de enero de 1962, ltima plana, Nm. 13181, ao XXXVII, tomo CXLI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 18 de enero de 1962, p. 1, Nm. 13181, ao XXXVII,
tomo CXLI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 19 de febrero de 1962, ltima plana, Nm. 13213, ao XXXVII, tomo CXLII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 23 de febrero de 1962, p. 9, Nm. 13217, ao XXXVII,
tomo CXLII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 29 de marzo de 1962, p. 11, Nm. 13243, ao XXXVII,
tomo CXLII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 31 de marzo de 1962, 1 plana reverso, Nm. 13252, ao
XXXVII, tomo CXLII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 10 de junio de 1962, p. 8, Nm. 13322, ao XXXVIII,
tomo CXLIII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 16 de agosto de 1962, p. 7, vida social, Nm. 13389, ao
XXXVIII, tomo CXLIII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 15 de septiembre de 1962, ltima plana, Nm. 13419, ao
XXXVIII, tomo CXLIII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 17 de septiembre de 1962, ltima plana, Nm. 13420, ao
XXXVIII, tomo CXLIII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 2 de octubre de 1962, p. 2, Nm. 13435, ao XXXVIII,
tomo CXLIII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 12 de octubre de 1962, p. 1, Nm. 13445, ao XXXVIII,
tomo CXLIII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 17 de octubre de 1962, p. 3, Nm. 13450, ao XXXVIII,
tomo CXLIII.
433
434
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 9 de octubre de 1964, p. 5, vida social, Nm. 14161, ao
XL, tomo CLIV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 15 de octubre de 1964, p. 5, Nm. 14944, ao XLII,
tomo CLXII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 23 de octubre de 1964, p. 3, Nm. 14175, ao XL,
tomo CLIV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 28 de octubre de 1964, p. 3, Nm. 14180, ao XL, tomo CLIV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 5 de noviembre de 1964, p. 3, Nm. 14188, ao XL,
tomo CLIV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 11 de noviembre de 1964, p. 3 (pgina Editorial) Urbansticas El Plano Regulador de Mrida, Nm. 14194, ao XL, tomo CLIV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 17 de noviembre de 1964, p. 7, Nm. 14200, ao XL,
tomo CLIV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 22 de noviembre de 1964, p. 11, Nm. 14204, ao XL,
tomo CLIV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 2 de diciembre de 1964, p. 3, Nm. 14214, ao XL, tomo CLIV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 3 de diciembre de 1964, p. 3, Nm. 14215, ao XL, tomo CLIV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 10 de diciembre de 1964, p. 3, Nm.14222, ao XL,
tomo CLIV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 16 de diciembre de 1964, ltima pgina, Nm. 14228, ao
XL, tomo CLIV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 17 de diciembre de 1964, p. 6, Nm. 14229, ao XL,
tomo CLIV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 1 de enero de 1965, p. 6, Nm. 14243, ao XL, tomo CLV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 23 de enero de 1965, p. 2, Nm. 14264, ao XL, tomo CLV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 23 de enero de 1965, p. 7, Nm. 14,264, ao XL, tomo CLV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 24 de enero de 1965, p. 2, Nm. 14265, ao XL,
tomo CLV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 1 de febrero de 1965, p. 8, Nm. 14273, ao XL, tomo CLV.
435
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 1 de febrero de 1965, p. 9, Nm. 14273, ao XL, tomo CLV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 2 de febrero de 1965, p. 6, Nm. 14274, ao XL, tomo CLV.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 1 de abril de 1965, p. 9, Nm. 14331, ao XL, tomo CLVI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 2 de abril de 1965, p. 13, Nm. 14332, ao XL, tomo CLVI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 21 de abril de 1965, 1 plana, Nm. 14351, ao XL, tomo CLVI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 22 de abril de 1965, p. 3, Pg. Editorial, Nm. 14352, ao
XL, tomo CLVI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 25 de abril de 1965, p. 5, Nm. 14355, ao XL, tomo CLVI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 27 de abril de 1965, 1 Plana, Nm. 14357, ao XL,
tomo CLVI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 3 de mayo de 1965, p. 4, Nm. 14362, ao XL, tomo CLVI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 11 de mayo de 1965, p. 3, Nm. 14370, ao XL, tomo CLVI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 27 de agosto de 1965, p. 6, Nm. 14478, ao XLII, tomo CLVII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 2 de septiembre de 1965, ltima plana, Nm. 14484, ao
XLI, tomo CLVII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 10 de septiembre de 1965, p. 8, Nm. 14492, ao XLI,
tomo CLVIII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 10 de septiembre de 1965, p. 9, Nm. 14492, ao XLI,
tomo CLVII.
Novedades de Yucatn, Mrida, Mxico, 7 de octubre de 1965, Nm. 186, ao I.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 12 de noviembre de 1965, p. 7, Nm. 14554, ao XLI,
tomo CLVIII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 15 de noviembre de 1965, p. 7, Nm. 14557, ao XLI,
tomo CLVIII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 23 de noviembre de 1965, p. 10, Nm. 14564, ao XLI,
tomo CLVIII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 25 de noviembre de 1965, p. 6, Nm. 14566, ao XLI,
tomo CLVIII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 9 de diciembre de 1965, p. 9, Nm. 14580, ao XLI,
tomo CLVIII.
436
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 21 de diciembre de 1965, p. 10, Nm. 14592, ao XLI,
tomo CLVIII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 8 de enero de 1966, p. 1 y 2, Nm. 14608, ao XLI,
tomo CLIX.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 21 de enero de 1966, p. 1, Nm. 14621, ao XLI, tomo CLIX.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 31 de enero de 1966, p. 1, Nm. 14631, ao XLI, tomo CLIX.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 11 de febrero de 1966, p. 9, Nm. 14642, ao XLI, tomo CLIX.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 2 de abril de 1966, p. 11, Nm. 14332, ao XL, tomo CLVI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 3 de abril de 1966, p. 1, Nm. 14333, ao XL, tomo CLVI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 7 de abril de 1966, p.9, Nm. 14696, ao XLI, tomo CLIX.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 29 de mayo de 1966, p. 6, Nm. 14747, ao XLI, tomo CLIX.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 24 de junio de 1966, p. 1 y 8, Nm. 14773, ao XLL,
tomo CLX.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 29 de junio de 1966, p. 1, Nm. 14778, ao XLII, tomo CLX.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 30 de junio de 1966, p. 2, Nm.14779, ao XLII, tomo CLX.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 15 de julio de 1966, p. 12, Nm. 14794, ao XLII, tomo CLXI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 23 de julio de 1966, p. 1 y 2, Nm. 14802, ao XLII,
tomo CLXI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 28 de julio de 1966, Nm. 14807, ao XLI,I tomo CLXI.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 27 de agosto de 1966, p. 2, Nm. 14837, ao XLIII,
tomo CLXX.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 6 de septiembre de 1966, p. 4, Nm. 14847, ao XLII,
tomo CLXII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 27 de septiembre de 1966, 1 Plana, Nm. 14867, ao XLII,
tomo CLXII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 3 de octubre de 1966, p. 9, Nm. 14873, ao XLII, tomo CLXII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 4 de octubre de 1966, p. 2, Nm. 14874, ao XLII, tomo CLXII.
Diario de Yucatn, Mrida, Mxico, 12 de noviembre de 1966, p. 11, Nm. 14912, ao XLII,
tomo CLXII.
437
438
439
440
Documentos e informes
Informe de Gobierno del ciudadano Ernesto Novelo Torres, gobernador constitucional de Yucatn, a la XXXV Legislatura del Estado, ao de 1942, Mrida, Mxico.
Informe del ciudadano Ernesto Novelo Torres, gobernador constitucional de Yucatn, ante la
XXXVI Legislatura del Estado, ao de 1944, Mrida, Mxico.
Informe del ciudadano Ernesto Novelo Torres, gobernador constitucional de Yucatn, ante la
XXXV Legislatura del Estado, ao de 1945, Mrida, Mxico.
Informe de Gobierno, del gobernador constitucional de Yucatn, Jos Gonzlez Beytia, ledo
ante la XXXVII Legislatura de Yucatn, comprendido del 1 de febrero al 31 de diciembre de 1946,
Mrida, Mxico, 1947.
441
Informe del profesor Jos Gonzlez Beytia, gobernador constitucional del estado de Yucatn, ao
de 1948, Mrida, Mxico.
Informe del ciudadano profesor Jos Gonzlez Beytia, gobernador constitucional del estado de
Yucatn, ao de 1950, Mrida, Mxico.
II Informe de Gobierno del ciudadano Agustn Franco Aguilar, presentado ante la XLI Legislatura
del Estado, comprendido del 1 de febrero de 1959 al 31 de enero de 1960, Mrida, Yucatn,
Mxico, 1960.
III Informe de Gobierno del ciudadano Agustn Franco Aguilar, presentado ante la XLI Legislatura
del Estado, comprendido del 1 de febrero de 1960 al 31 de enero de 1961, Mrida, Yucatn,
Mxico, 1961.
I Informe del C. Luis Torres Mesas gobernador constitucional ante la H. XLIII Legislatura del Estado, 1 de febrero de 1964 a 31 de enero de 1965, Mrida, Mxico, 1965.
II Informe de Gobierno del C. Luis Torres Mesas, gobernador constitucional, ante la H. XLIII Legislatura del Estado, del 1 de febrero de 1965 a 31 de enero de 1966, Mrida, Mxico, 1966.
Tercer Informe del C. Luis Torres Mesas, gobernador constitucional de Yucatn, ante la XLIV Legislatura del Estado, comprendido del 1 febrero de 1966 a 31 de enero de 1967, Mrida, Mxico, 1967.
Quinto Informe del C. Luis Torres Mesas, gobernador constitucional de Yucatn, ante la XLIV
Legislatura del Estado, comprendido del 1 de febrero de 1968 a 31 de enero de 1969, Mrida,
Mxico, 1969.
VI Informe del C. Luis Torres Mesas, gobernador constitucional ante la H. XLIV Legislatura del
Estado, 1 de febrero de 1969 a 31 de enero de 1970, Mrida, Mxico, 1970.
442
Henequeneros de Yucatn, Informe del Consejo Directivo de Henequeneros de Yucatn, correspondiente al ejercicio de 1950, Editorial Zamn, Mrida Yucatn, 1951.
Entrevistas
GONZLEZ Canto, Elvia Mara, entrevista realizada al ingeniero Ramn Lpez Peraza, residente
de obra de la colonia Miguel Alemn, el da 7 de junio de 1998.
_______, entrevista realizada al ingeniero Mario Duarte Peraza, pionero de los elementos prefabricados presforzados, el 7 de julio de 2007.
_______, entrevista a la decoradora Beatriz Moreno de Manero, colaboradora del arquitecto Enrique Manero Pen, el 4 de junio de 2008.
_______, entrevista al ingeniero Mario Duarte Carrillo, autor y constructor del proyecto, el 28 de
julio de 2008.
REYES Casares, Mara Elisa y Mara de Lourdes Fernndez F, entrevista realizada al Sr. Ernesto
Casares Cano, presidente del Consejo de Administracin de la compaa Casas de Concreto Prefabricadas, S.A., el 18 de abril de 1991, para trabajo de Historia, de la FAUADY, Indito.
Documentos en lnea
http://biblioweb.dgsca.unam.mx/diccionario/htm/articulos/sec_6.htm, consultada el 28
de mayo de 2007 a las 12:30 horas.
http://www.congresoyucatan.gob.mx/interes/HISTORIA/xxv_legislatura_constitucional.htm
obtenida el 27 noviembre 2007, 18:36 horas.
443
http://www.portalplanetasedna.com.ar/estilo_americano.htm, consultada el 25
de marzo de 2007, 17:40 hrs.
http://www.educacion.yucatan.gob.mx/quienes/historia.php?ver=03, consultada el 28
de mayo de 2007, 19:30 horas.
http://www.divulcat.com/recursos/enciclopedia/guerra_cristera, consultada el 25
de abril de 2006, 15:42 horas.
http://www.franciscanos.org/temas/banquete5.htm, consultada el 28 de enero
de 2008, 17: 45 horas.
http://www.ucm.es/info/nomadas/10/literas.pdf., consultada el 6 de diciembre
de 2005, 21:00 horas.
444
Lista de imgenes
Captulo 2
Fig. 1. Plano de la ciudad de Mrida de 1920, tomado de Mrida el despertar
de un siglo, p. 5.
Fig. 2. Plano de la ciudad de Mrida de 1938.
Fig. 3. Plano de la densidad de poblacin, en Plano Regulador de la ciudad
de Mrida, 1953.
Fig. 4. Plano de la colonia Mxico, 1944. Imagen tomada del Diario de Yucatn,
29 febrero 1948.
Fig. 5. Plano de la colonia Miguel Alemn, Imagen tomada del Plano de la Ciudad de
Mrida publicado en 1957 por el Comit de Planificacin del Estado de Yucatn.
Fig. 6. Plano de la colonia Pensiones. Imagen tomada del Plano de la Ciudad de
Mrida publicado en 1957 por el Comit de Planificacin del Estado de Yucatn.
Fig. 7. Plano de la colonia Corts Sarmiento, 1944. Imagen tomada del Diario
de Yucatn, 31 diciembre 1944.
Fig. 8. Plano del Reparto Carrillo y Ancona, 1945. Imagen tomada de Diario
de Yucatn, 12 noviembre 1944.
Fig. 9. Plano de la colonia Chuminpolis, 1944. Imagen tomada del Diario
de Yucatn, 15 octubre 1944.
Fig. 10. Plano del Fraccionamiento Henequeneros. Imagen tomada del Diario
de Yucatn, 22 julio 1945.
Fig. 11. Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto. Imagen tomada del Diario
de Yucatn, 1 febrero 1944.
Fig. 12. Mercado municipal, vistas de las fachadas de derecha a izquierda: norte
y poniente. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 6 noviembre 1947.
Fig. 13. Banco Familiar de Ahorros. Imagen tomada del Diario de Yucatn,
15 abril 1945.
Fig. 14. Cine Rex. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 9 enero 1949.
445
49
52
52
62
62
65
67
67
68
68
73
73
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75
Fig. 15. Teatro Mrida. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 9 diciembre 1949.
Fig. 16. Hotel Mrida. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 23 julio 1942.
Fig. 17. Estacin Gasolinera 18 de Marzo. Imagen tomada del Diario de Yucatn,
31 enero 1940.
Fig. 18. Edificio de La Latinoamericana, Compaa de Seguros. Imagen tomada
del Diario de Yucatn, 12 de febrero de 1947.
Fig. 19. Compaa General de Seguros La Peninsular. Imagen tomada del Diario
de Yucatn, 2 de octubre 1948. Proyecto: Arq. Leopoldo Tommasi Lpez.
Construccin: Arq. Miguel ngel Cervera Mangas.
Fig. 20. Calle Nueva 63-A. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 3 julio 1949.
Figs. 20a, 20b, y 20c, Parque de las Amricas, 1945. Imgenes tomadas del lbum
monogrfico del Parque de las Amricas. Arqs. Max y Manuel Ambilis.
Fig. 21. Plano de la ciudad de Mrida, 1957. Imagen tomada del Diario de Yucatn
el 8 de septiembre de 1957, p. 14.
Fig. 22. Planta Termoelctrica Federal Nach Cocom, 1956. Imagen tomada del Diario
de Yucatn el 20 de abril de 1956, p. 9. Ing. Ral Fernndez Cepeda.
Fig. 23. Mercado Pablo Moreno, suburbio San Sebastin, 1958. Imagen tomada del
Diario de Yucatn, 16 de septiembre de 1958, Ing. Eloy Cceres y Cceres.
Fig. 24. Mercado del barrio de Santa Ana, 1959. Imagen tomada del Diario
de Yucatn, 8 de diciembre de 1959, p. 4. Ing. Rubn Encalada Alonzo, colab.
Ing. Cuevas y pasante de Ing. Mario Zavala Velsquez.
Fig. 25. Instituto Neuropsiquitrico, complejo de la Paz, 1953-1954. Diseo y obra
del Ing. Mario Duarte Carrillo.
Fig. 26. Facultad de Medicina, 1948-1952.
Fig. 27. Centro de Salud, calle 50 x 67, 1958. Imagen tomada del Diario de Yucatn,
el 14 de marzo de 1958, p. 6.
Fig. 28. Escuela Santiago Meneses, 1952-1957. Ing. Ramn Lpez Peraza.
Fig. 29. Banco de Campeche. Sucursal Mrida, 1956. Imagen tomada del Diario
de Yucatn el 21 marzo de 1956, p. 5. Arq. Flix Mier y Tern L. e Ing. Franz R.
Fortuny Cepeda.
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Fig. 30. Banco de Comercio de Yucatn, 1958. Imagen tomada del Diario de Yucatn
el 26 abril de 1958, p. 6. Arq. Flix Mier y Tern L. Ing. Franz Fortuny Cepeda.
Fig. 31. Cine Aladino, 1957. Arq. Flix Mier y Tern e Ing. Franz R. Fortuny Cepeda.
Fig. 32. Teatro de la Universidad, 1958. Imagen tomada del Diario de Yucatn,
19 de noviembre de 1958, p. 4.
Fig. 33. Concesionarios Diesel (oficinas y talleres), 1959. Ingenieros Civiles y Contratistas Asociados, S. A. Gerente: Ing. Jorge Fernando Carrillo Herrera. Integrantes: Ing.
Wilbert Carrillo Herrera.
Fig. 34. Hospital Ortopdico Beatriz Velasco Alemn, u Hospital del Nio Lisiado,
1952. Imagen tomada del Diario de Yucatn, el 2 de febrero de 1952. Arq. Miguel
ngel Cervera Mangas.
Fig. 35. Escuela Juan Crisstomo Cano y Cano, 1957. Ing. Ramn Lpez Peraza.
Fig. 36. Fbrica de Galletas Dond, 1950. Imagen tomada del Diario de Yucatn el
1 de enero de 1951, p. 9. Ing. Mario Cmara Rosas.
Fig. 37. Planta de la Cervecera Yucateca, 1951. Imagen tomada del Diario de Yucatn
el 15 agosto 1951. Construcciones de concreto armado: Ing. Francisco Rubio Ibarra;
de ingeniera civil: Ing. Ramiro Bojrquez Molina.
Fig. 38. Planta de la Embotelladora Coca-Cola. Imagen tomada del Diario de Yucatn
el 11 de marzo de 1957. Ing. Ulises Gonzlez Torre y lvaro Ponce Pen.
Fig. 39. Planta de Cementos Maya, S.A. 1958. Imagen tomada del Diario de Yucatn
el 21 mayo 1958, p. 7.
Fig. 40. Fraccionamiento San Miguel, 1963. Imagen tomada del Diario de Yucatn
el 23 de diciembre de 1963, p. 10.
Fig. 41. Imagen tomada del Diario de Yucatn el 17 de noviembre de 1964, p. 7.
Fig. 42. Fraccionamiento Lourdes. Imagen tomada del Diario de Yucatn el 9 de
diciembre de 1965, p. 9.
Fig. 43. Fraccionamiento Lourdes. Imagen tomada del Diario de Yucatn el 24 de
junio de 1971.
Fig. 44. Fraccionamiento Mrida. Imagen tomada del Diario de Yucatn el 7 de abril
de 1966, p. 9.
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Fig. 60. Central Quirrgica. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 11 de febrero
de 1966, p. 9.
Fig. 61. Unidad Mrida del Instituto Mexicano del Seguro Social, 1962. Imagen tomada
del Diario de Yucatn, el 14 de enero de 1962.
Fig. 62. Pabelln de Consulta Externa del Hospital 20 de Noviembre. Imagen tomada
de IV Informe de Gobierno del C. Agustn Franco Aguilar, 1962.
Fig. 63. Pabelln de Consulta Externa del Hospital 20 de Noviembre. Imagen tomada
de IV Informe de Gobierno del C. Agustn Franco Aguilar, 1962.
Fig. 64. ISSSTE, 1966. Imagen tomada del Diario de Yucatn el 23 de febrero
de 1967, p. 8.
Fig. 65. Mercado Santos Degollado, barrio de Santiago, 1964. Imagen tomada del
Diario de Yucatn, el 1 de febrero de 1965, p. 9. Contratista: Ing. Carlos Cuevas May,
Residente: Ing. Rubn Cuevas Cantillo, Asesor del Departamento de Obras Pblicas
a cargo del Ing. Rubn Encalada Alonzo.
Fig. 66. Mercado Chem Bech, Suburbio de Chuminpolis, 1969. Imagen tomada del
Diario de Yucatn, el 5 de mayo de 1969, p. 2.
Fig. 67. Centro Comercial La Abeja. Imagen tomada del Diario de Yucatn el 18
de febrero de 1968, p. 8.
Fig. 68. Terminal de la Unin de Camioneros de Yucatn. Imagen tomada del Diario
de Yucatn, 25 de mayo de 1968, p. 2. Arq. Fernando Garca Ponce e Ings. lvaro
Ponce Pen y Ulises Gonzlez Torre.
Fig. 69. Terminal de la Unin de Camioneros de Yucatn, archivo del Ing. lvaro Ponce
Pen. Arq. Fernando Garca Ponce e Ings. lvaro Ponce Pen y Ulises Gonzlez Torre.
Fig. 70. Sede de la Delegacin de Trnsito Federal, Polica de Caminos y Turismo,
1962. Imagen tomada de IV Informe de Gobierno del C. Agustin Franco Aguilar, 1962.
Arq. Fernando Garca Ponce, Ings. Ulises Gonzlez Torre y lvaro Ponce Pen.
Fig. 71. Junta Local de Caminos del Estado, 1962. Imagen tomada del Diario de Yucatn,
17 de enero de 1962. Proyecto: Ing. Santiago Martnez Ros. Administracin de obra:
Ing. Jorge Daz Sosa.
Fig. 72. Bodegas en el Enlace, para fibra de henequn ejidal.
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Fig. 73. Productos de Harina, S. A. Dond. Imagen tomada del Diario de Yucatn, el 8
de diciembre de 1960, p. 7. Arq. Flix Mier y Tern e Ings. Franz R. Fortuny y Manuel
Rodrguez Pen.
Fig. 74. Planta Embotelladora del Sureste, S.A. Imagen tomada del Diario de Yucatn,
el 22 de abril de 1961. Arq. Flix Mier y Tern e Ing. Franz R. Fortuny Cepeda.
Fig. 75. Planta Embotelladora Peninsular, S.A. Imagen tomada del Diario de Yucatn,
el 2 de octubre de 1962, p. 6. Arq. Fernando Garca Ponce e Ings. lvaro Ponce Pen
y Ulises Gonzlez Torre.
Fig. 76. Planta Embotelladora Peninsular, S.A. Perspectiva del autor, archivo del
Ing. lvaro Ponce Pen.
Fig. 77. Centro Deportivo de Libans, 1967. Imagen tomada del Diario de Yucatn el 29
de diciembre de 1967, p. 7. Arq. Fernando Garca Ponce e Ings. lvaro Ponce Pen y
Ulises Gonzlez Torre.
Fig. 78. Club Campestre de Mrida, 1962. Imagen tomada del Diario de Yucatn el 19
de febrero de 1962.
Fig. 79. Banco Hipotecario de Yucatn, imagen tomada del Diario de Yucatn, el 15
noviembre de 1965, p. 7.
Fig. 80. Banco Comercial Peninsular S. A. Imagen tomada del Diario de Yucatn el 16
de junio de 1969, p. 7.
Fig. 81. Banco del Sureste, Sucursal Montejo, imagen tomada del Diario de Yucatn,
el 10 de marzo de 1960, p. 7.
Fig. 82. Banco de Comercio de Yucatn, imagen tomada del Diario de Yucatn, el 13
de diciembre de 1966, p. 5.
Fig. 83. Balneario Popular, entre los puertos de Chelem y Progreso. Imagen tomada de
I Informe de Gobierno del C. Luis Torres Mesas, 1965, p. 16.
Fig. 84. Hotel Panamericana, imagen tomada del Diario de Yucatn el 31 de marzo
de 1962.
Fig. 85. Hotel Mara del Carmen, imagen tomada del Diario de Yucatn el 23 de
enero de 1965, p. 7.
Fig. 86. Hotel Casa del Balam, 1967.
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Captulo 3
Fig. 1. Distribucin de los sanatorios para ejidatarios henequeneros. Tomado del
Informe del Consejo Directivo de Henequeneros de Yucatn, 1950.
Fig. 2. Relacin de sanatorios y camas de Henequeneros de Yucatn. Tomado del
Informe del Consejo Directivo de Henequeneros de Yucatn, 1950.
Fig. 3. Plano Tipo de los sanatorios de Hunucm y Acanceh. Imagen tomada del
Informe del Consejo Directivo de Henequeneros de Yucatn, 1950.
Fig. 4. Plano del hospital para la ciudad de Izamal. Imagen tomada del Informe del
Consejo Directivo de Henequeneros de Yucatn, 1950.
Fig. 5. Fotografa area del Hospital para Ejidatarios Henequeneros. Imagen tomada
del Informe de Gobierno del ciudadano Profr. Jos Gonzlez Beytia, 1946.
Fig. 6. Perspectiva area, realizado por el Arq. Carlos Castillo Montes de Oca. Imagen
tomada del Archivo Vertical de la Hemeroteca Jos Mara Pino Surez.
Fig. 7. Fachada principal del Hospital para Ejidatarios en Mrida. Imagen tomada del
Informe de Gobierno del ciudadano Ernesto Novelo Torres, 1945.
Fig. 8. Vista del patio a travs del cual se accede a los pabellones de hospitalizacin.
Imagen tomada del Informe de Gobierno del ciudadano Ernesto Novelo Torres, 1945.
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Fig. 9. Vista de los extremos de los pabellones de hospitalizacin. Imagen tomada del
Informe de Gobierno del ciudadano Ernesto Novelo Torres, 1945.
Fig. 10. Plano de la colonia Mxico en 1948. Imagen tomada del Diario de Yucatn,
29 de febrero de 1948, p. 9.
Fig. 11. Pie del plano de la colonia Mxico. Imagen tomada del Diario de Yucatn,
29 de febrero de 1948, p. 9.
Fig. 12. Anuncio de la Compaa Impulsora Urbana de Yucatn, S.A. Imagen tomada
del Diario de Yucatn, el 18 de junio de 1949, p. 9.
Fig. 13. Perspectiva de la Escuela de Artes y Oficios del arquitecto Leopoldo Tommasi
Lpez. Imagen tomada de la Revista Alma Yucateca, febrero de 1945, pg. 25.
Fig. 14. Casa del Sr. Felipe H. Escalante Marn en la colonia Mxico, construida de
concreto prefabricado por la Impulsora Urbana de Yucatn. Imagen tomada del Diario
de Yucatn el 18 de junio de 1949.
Fig. 15. Venta de edificio en la colonia Mxico por Fomento de Yucatn. Imagen
tomada del Diario de Yucatn el 18 de junio de 1949.
Fig. 16. Venta de residencias en la aristocrtica colonia Mxico. Imagen tomada del
Diario de Yucatn, 29 de abril de 1962.
Fig. 17. Unidad Habitacional Revolucin construida por Cordemex para sus obreros.
Imagen tomada del VI Informe de Gobierno del C. Luis Torres Mesas, 1970, p. 33.
Fig. 18. Propaganda de una casa para sortear. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 29
de marzo de 1949, p. 6.
Fig. 19. Unidad de Urologa y Dermatologa del Hospital OHorn, con elementos
prefabricados en tan slo 63 das. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 2 de febrero
de 1949.
Fig. 20. Anuncio de terminacin de una obra en la playa en tan slo 90 das. Imagen
tomada del Diario de Yucatn, 15 agosto de 1948.
Fig. 21. Como por arte de magia, anuncio sobre la rapidez de construccin
de Casas de Concreto Prefabricadas S.A. e Impulsora Urbana de Yucatn, S.A. Imagen
tomada del Diario de Yucatn,16 de octubre de 1949, p. 5.
Fig. 22. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 17 enero de 1948, p. 7.
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Fig. 38. Santuario del Santo Nio de Atocha, 1961. Imagen tomada del Diario de
Yucatn, 27 de octubre de 1962 Arq. Flix Mier y Tern Lejeune.
Fig. 39. Colegio Rogers Hall, 1963, Ing. Fernando Roche Martnez. Ing. Fernando
Roche Martnez.
Fig. 40. Mercado Santos Degollado, 1964. Contratista: Ing. Carlos Cuevas May,
residente: Ing. Rubn Cuevas Cantillo, asesor el Departamento de Obras Pblicas
a cargo del Ing. Rubn Encalada Alonzo.
Fig. 41. Escuela Secundaria Federal; 1964. Carlos Castillo Zavala.
Fig. 42. Aeropuerto Internacional Manuel Crescencio Rejn, de la ciudad de Mrida
1967-1970. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 11 de agosto de 1970. Arq. Enrique
Manero Pen.
Fig. 43. Mercado de Santa Ana, barrio de Santa Ana, 1959. Imagen tomada del Diario
de Yucatn, 10 diciembre 1959. Ing. Rubn Encalada Alonzo, colab. Ing. Cuevas y
pasante de Ing. Mario Zavala Velsquez.
Fig. 44. Servicio Lpez, 1961. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 18 marzo 1961.
Ing. Eloy Cceres e Ing. Luis Fernndez Lope.
Fig. 45. Toyota, sala de exhibicin y ventas, 1961, Imagen tomada del Diario de
Yucatn, 16 de septiembre de 1961.
Fig. 46. Banco de Comercio de Yucatn, S.A. Sucursal Cordemex, 1970. Imagen
tomada del Diario de Yucatn, 6 de febrero de 1970.
Fig. 47. Panificadora Montejo, 1956, imagen tomada del Diario de Yucatn, el 12
de febrero de 1956.
Fig. 48. Edificio Ford Torre, S.A. 1963. Arq. Miguel ngel Cervera Mangas.
Fig. 49. Teatro de la Escuela Secundaria Agustn Vadillo Cicero, 1962. Ing. Rubn
Encalada Alonzo.
Fig. 50. Santuario del Sagrado Corazn de Jess. Col. Alemn, 1962. Arq. Enrique
Manero Pen.
Fig. 51. Estructura de casetones en la capilla de la Casa de la Cristiandad.
Fig. 52. Losas de techo canal en rea de acceso a capilla de la Casa de la Cristiandad.
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Fig. 53. Losas de concreto armado apoyadas en trabes y columnas metlicas en Casa
de la Cristiandad.
Fig. 54. Trabelosa en salones en Casa de la Cristiandad.
Fig. 55. Oficinas del Banco de Comercio de Yucatn, 1958, Imagen tomada del Diario
de Yucatn, 26 de abril de 1958. Arq. Flix Mier y Tern L. e Ing. Franz R. Fortuny.
Fig. 56. Autos Torre, 1958, Imagen tomada del Diario de Yucatn, 1 de junio de 1958.
Arq. Flix Mier y Tern, Ing. civil Mario Duarte Carrillo e Ing. civil Ramiro Bojrquez.
Fig. 57. Banco del Sureste, Sucursal Montejo, 1960. Imagen tomada del Diario de
Yucatn, 10 marzo 1960.
Fig. 58. Sala de Exhibicin y Ventas de Toyota del Sureste, S.A. de C.V. Imagen tomada
del Diario de Yucatn, 18 septiembre de 1961.
Fig. 59. Banco Nacional de Mxico, S.A. Sucursal Mrida, 1963. Imagen tomada del
Diario de Yucatn, 25 de marzo de 1963. Arq. Gustavo Struck B.; Construccin:
Arq. Flix Mier y Tern. Ing. Manuel Rodrguez Pen e Ing. Franz Fortuny.
Fig. 60. Hotel Mara del Carmen, Imagen tomada del Diario de Yucatn, 23 de enero
de 1965. Arq. Fernando Lpez Escalante, Ing. Agustn Pen de Regil.
Fig. 61. Edificio para oficinas, finales de los sesenta.
Fig. 62. Biblioteca Carlos R. Menndez; 1964. Imagen tomada del Diario de Yucatn,
l de enero de 1965. Arq. Leopoldo Tommasi Lpez.
Fig. 63. Nueva Calle Comercial, 63-A. Imagen tomada del Diario de Yucatn,
3 julio 1949, p. 4.
Fig. 64. La Joya de Mxico, 1954.
Fig. 65. Librera La Literaria, 1956. Imagen tomada del Diario de Yucatn el 15 de
julio de 1956.
Fig. 66. Philco de Yucatn, S.A, 1959. Imagen tomada de Diario de Yucatn
el 8 de octubre de 1959.
Fig. 67. Refaccionaria y Autos Torre, 1958. Arq. Flix Mier y Tern Lejeune.
Fig. 68. Televisora de Yucatn. Arq. Fernando Garca Ponce. Imagen tomada del Diario
de Yucatn el 31 de enero 1963. Vista parcial del edificio.
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Fig. 69. Televisora de Yucatn. Arq. Fernando Garca Ponce. Imagen tomada del Diario
de Yucatn el 31 de enero 1963. Perspectiva del arquitecto.
Fig. 70. Centro comercial Minimax. Imagen tomada del Diario de Yucatn el 13 de
noviembre 1963.
Fig. 71. Supermercado Komesa, Santiago, 1964. Imagen tomada del Diario de Yucatn
el 16 diciembre 1964.
Fig. 72. Sears. Imagen tomada del Diario de Yucatn el 28 agosto 1969.
Fig. 73. Fundacin La Yucateca. 17 noviembre de 1965.
Fig. 74. Compaa Comercial del Sur. Imagen tomada del Diario de Yucatn el
2 febrero 1965.
Fig. 75. Distribuidora York. Imagen tomada del Diario de Yucatn el 3 octubre 1966.
Fig. 76. Canto Distribuidora. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 23
noviembre 1967.
Fig. 77. P.M. Steel. Imagen tomada del Diario de Yucatn, el 14 de abril de 1967.
Fig. 78. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 15 de marzo 1953.
Fig. 78 A. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 26 de mayo 1953.
Fig. 78 B. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 12 noviembre 1965.
Fig. 79. Toyota del Sureste, S.A. Sala de Exhibicin y Ventas, 196, C. 59 Nm. 562.
Fig. 80. Sala de Exhibicin de Distribuidora DINA-Renault, 1961. Arq. Fernando Lpez
Escalante. Prolongacin de Montejo.
Fig. 81. Ford Compaa Distribuidora de Automviles, S.A., 1964. Prolongacin
de Montejo.
Fig. 82. Compaa Peninsular de Autos, S.A. imagen tomada del Diario de Yucatn,
de C.V., 1966 Arq. Juan Kluchnik e Ing. Mario Duarte Carrillo.
Fig. 82-A Agencias Mercantiles S.A., 1966, imagen tomada del Diario de Yucatn,
15 julio 1966. Arqto. Fernando Garca Ponce, Ing. Ulises Gonzlez Torre e Ing. lvaro
Ponce Pen.
Fig. 82-B Automaya, 1967, imagen tomada del Diario de Yucatn, 7 de abril de 1967.
Departamento de Planeacin y Proyectos de Agencias de la Fbrica Automex, S.A.
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Fig. 82-C Edificio Ford Torre, S.A., 1963, imagen tomada del Diario de Yucatn,
15 diciembre 1963. Arq. Miguel ngel Cervera Mangas.
Fig. 83. Caricatura que seala la falta de servicios bsicos como lo es el bao. Imagen
tomada del Diario de Yucatn, 31 de octubre de 1947, p. 11.
Fig. 84. Caricatura: en sta se destacan los aspectos de la optimizacin del espacio.
Imagen tomada del Diario de Yucatn, 20 de octubre de 1954, p. 9.
Fig. 85. Caricatura: el mensaje emitido muestra cmo la arquitectura pretenda
condicionar modos de vida. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 11 de julio
de 1950, p. 9.
Fig. 86. Caricatura: aqu se denota la preocupacin de querer llevar a la vida cotidiana
los modernismos de la arquitectura. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 20 de
octubre de 1956, p. 11.
Fig. 87. Caricatura: esta grfica ilustra la discusin entre la modernidad y la tradicin.
Imagen tomada del Diario de Yucatn, 3 de diciembre de 1950, p. 19.
Fig. 88. Caricatura: el discurso pone de manifiesto la nostalgia hacia las formas del
pasado. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 1 de diciembre de 1957, p. 15.
Fig. 89. Caricatura: se puede hacer la lectura de que se trata de un problema tan
viejo como la poca de la Colonia, y la dependencia econmica del estado para
con la federacin para realizar ese tipo de obras. Imagen tomada del Diario de
Yucatn, 14 de julio de 1967.
Fig. 90. Caricatura: la figura ilustra una posible coercin para lograr la aprobacin
de las tarifas. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 2 de agosto de 1967.
Fig. 91. En esta caricatura ante las tarifas nuevas del agua potable y su alto precio, todo
en consecuencia suba. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 4 de agosto de 1967.
Fig. 92. Caricatura: aqu se justificaba el precio de otros productos como consecuencia
del alto precio del agua potable. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 6 de
septiembre de 1966.
Fig. 93. Caricatura: los problemas urbanos causados por el congestionamiento
de autos y las soluciones modernas. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 23
de enero de 1967.
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Fig. 94. Caricatura: en esta grfica se ilustra el crecimiento desmedido que ha tenido el
problema de la vivienda. Imagen tomada del Diario de Yucatn, 11 de julio de 1969.
Fig. 95. Caricatura: el tema de la igualdad y los derechos entre hombres y mujeres,
incluso en la ropa y la relacin entre los dos sexos. Imagen tomada del Diario de
Yucatn, 25 de julio de 1969.
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Captulo 4
Fig. 1. Vista area del Hospital OHorn. Imagen tomada de Yucatn, Recuerdo
de la primera visita del Sr. Presidente de la Repblica Mexicana, General Don
Porfirio Daz, 1906.
Fig. 2. Planta del Hospital OHorn, con tipologa pabellonal. Imagen tomada de
la Enciclopedia Yucatanense, t. IV, p. 435.
Fig. 3. Fachada del Hospital OHorn. Imagen tomada del lbum conmemorativo
de las fiestas presidenciales.
Fig. 4. Vista general del Asilo Leandro Len Ayala. Imagen tomada de lbum
conmemorativo de las fiestas presidenciales.
Fig. 5. Fachada del sanatorio para dementes Len Ayala. Imagen tomada del lbum
conmemorativo de las fiestas presidenciales.
Fig. 6. Fachada principal del Sanatorio Rendn Peniche.
Fig. 7. Planta del Sanatorio Rendn Peniche. Imagen tomada de Cuadernos de
Arquitectura, Nm. 1.
Fig. 8. Fachada del Hospital del Nio. Imagen tomada del libro El Hospital del Nio.
Fig. 9. Planta del Hospital del Nio. Imagen tomada del libro El Hospital del Nio.
Fig. 10. Fachada del Centro Anticanceroso. Imagen tomada del Diario de Yucatn,
3 de abril de 1958.
Fig. 11. Planta del Centro Anticanceroso, proporcionado por la directora del
Centro en el ao 2008.
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Fig. 12. Axonomtrico del Hospital de Ejidatarios Henequeneros. Tomada del archivo
vertical de la Hemeroteca Jos Pino Surez del Estado de Yucatn.
Fig. 13. Fachada del Hospital de Ejidatarios Henequeneros. Tomada del documento
del Informe de Gobierno 1945, del gobernador Ernesto Novelo Torres.
Fig. 14. Fachada del Instituto Neuropsiquitrico.
Fig. 15. Croquis de la planta del Instituto Neuropsiquitrico (digitalizacin del plano
proporcionado por el Dr. Ral Crdenas Torre, director del Instituto Neuropsiquitrico).
Fig. 16. Fachada del Hospital Regional del ISSSTE. Imagen tomada del Diario de
Yucatn, el 23 de febrero de 1967.
Fig. 17. Vista de la Maternidad en Progreso. Imagen tomada del documento del Informe
de Gobierno 1961. Gobernador Agustn Franco Aguilar.
Fig. 18. Planta de la Maternidad en Progreso. Imagen tomada de Tesis de Licenciatura
del ingeniero civil Jos A. Surez Garca (1962).
Fig. 19. Croquis de la planta de la Clnica de Mrida.
Fig. 20. Perspectiva de la fachada de la Clnica de Mrida. Imagen realizada por
la autora, tomada del archivo del ingeniero lvaro Ponce Pen.
Fig. 21. Croquis de esquemas de distribucin de las escuelas primarias de 1932,
y fotografa de la escuela primaria en la colonia San Simn, Mxico D.F. 1932. Imagen
tomada de Juan OGorman, arquitectura escolar 1932, p. 28.
Fig. 22. Escuela en la colonia Obrera, vista desde la calle. Imagen tomada de
Juan OGorman, arquitectura escolar 1932, p. 102.
Fig. 23. Edificio escolar Nm. 5 Justo Sierra Mndez, 1948.
Fig. 24. Edificio escolar Nm. 11 Benito Jurez, 1949.
Fig. 25. Vista del conjunto del Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto. Imagen
tomada del lbum monogrfico del Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto.
Fig. 26. Fachada principal del Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto. Imagen
tomada del lbum monogrfico del Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto.
Fig. 27. Vista de las aulas hacia el poniente. Imagen tomada del lbum monogrfico
del Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto.
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Fig. 28. Esquema del Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto basado en la
descripcin del lbum monogrfico del Centro Educacional Felipe Carrillo Puerto.
Fig. 29. Escuela Alianza de Camioneros de Yucatn, 1947. Imagen tomada del Diario
de Yucatn, 23 de noviembre de 1947, p. 13.
Fig. 30. Patio de la Escuela Alianza de Camioneros de Yucatn.
Fig. 31. Escuela Primaria Albino J. Lope, 1948.
Fig. 32. Croquis Escuela Primaria Albino J. Lope.
Fig. 33. Escuela Primaria Abelardo Trujillo V. 1948.
Fig. 34. Croquis de la Escuela Primaria Abelardo Trujillo V.
Fig. 35. Escuela lvaro Obregn, 1948. Fachada principal orientada al norte, donde
se aprecia la fachada ciega.
Fig. 36. Escuela lvaro Obregn. Fachada oriente, imagen tomada del Diario de
Yucatn, el 2 de junio de 1950.
Fig. 37. Escuela Candelaria Ruz Patrn, Progreso, 1948.
Fig. 38. Proyecto de la Escuela Candelaria Ruz Patrn, imagen tomada del Diario
de Yucatn, 1 de mayo de 1948.
Fig. 39. Patio y corredores de los salones de la Escuela Candelaria Ruz Patrn,
Progreso, 1948.
Fig. 40. Croquis Escuela Candelaria Ruz Patrn, Progreso, 1948.
Fig. 41. Escuela Benito Jurez. Mrida, 1949. Compaa Harinera Peninsular.
Fig. 42. Escuela Jos Esteban Sols, Mrida, 1948-1950. Unin de Productores
Henequeneros. Arq. Manuel Ambilis.
Fig. 43. Fachada de la Escuela Filemn Villafaa Farfn. Progreso, 1950-1952.
Fig. 44. Fachada norte, hacia donde ven los salones, Escuela Filemn Villafaa Farfn.
Fig. 45. Croquis Filemn Villafaa Farfn, Progreso, 1950-1952 (planta baja).
Fig. 46. Croquis Filemn Villafaa Farfn. Progreso, 1950-1952 (planta alta).
Fig. 47. Escuela Presidente Miguel Alemn, Kanasn, 1950.
Fig. 48. Croquis Escuela Presidente Miguel Alemn, Kanasn, 1950 (planta baja).
Fig. 49. Croquis Escuela Presidente Miguel Alemn (planta alta).
Fig. 50. Vista de interior del Colegio Montejo.
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Fig. 68. Secundaria Agustn Vadillo Cicero, Mrida, 1960. Vista area tomada de google
earth, julio de 2007.
Fig. 69. Teatro de la Secundaria Agustn Vadillo Cicero, 1960. Ing. Agustn Escalante.
Fig. 70. Fotografa area del conjunto del Rogers Hall. Imagen proporcionada por
los directivos de la escuela.
Fig. 71. Croquis de la Escuela Rogers Hall.
Fig. 72. Colegio Rogers Hall. Ing. Fernando Roche Martnez.
Fig. 73. Croquis del Colegio Rogers Hall.
Fig. 74. Instituto Comercial Bancario, 1966.
Fig. 75. Instituto Comercial Bancario, interior.
Fig. 76. Colegio Ignacio Zaragoza, 1967.
Fig. 77. Colegio Ignacio Zaragoza, pasillo de comunicacin.
Fig. 78. Rodolfo Menndez de la Pea, 1968-1969. Imagen tomada del Diario
de Yucatn el 27 de enero de 1968.
Fig. 79. Primaria Federal Florinda Batista, 1968-1969. Imagen tomada del Diario
de Yucatn el 24 de septiembre de 1969.
Fig. 80. Iglesia de la Pursima, Monterrey, Nuevo Len, tomado del libro Enrique
de la Mora, de Alberto Gonzlez Pozo.
Fig. 81. Planta y axonomtrico del proyecto ganador del concurso del Santuario
del Sagrado Corazn de Jess del arquitecto Augusto Prez Palacios, tomado de
la Revista Arquitectura y lo Dems, Nm. 2.
Fig. 82. Iglesia de San Cayetano en Lindavista, en la ciudad de Mxico, arquitecto
Francisco J. Serrano, tomado del Boletn do.co.mo.mo, Nm. 8 verano 2005.
Fig. 83 Templo parroquial de Progreso, Yucatn, imagen tomada del Diario de Yucatn,
el 29 de enero de 1942. Arq. Carlos M. Castillo Montes de Oca.
Fig. 84 Interior del templo parroquial de Progreso, Yucatn. Imagen tomada del Diario
de Yucatn, el 29 de enero de 1942. Arq. Carlos M. Castillo Montes de Oca.
Fig. 85 Templo catlico de Holc, Yucatn. (1941)
Fig. 86 Interior templo catlico de Holc, Yucatn.
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Fig. 87 Santuario de Santa Teresita del Nio Jess, colonia Garca Giners. Imagen
tomada del Diario de Yucatn, el 11 de septiembre de 1944. Arq. Carlos M. Castillo
Montes de Oca.
Fig. 88 San Rafael Arcngel, colonia Chuminpolis. Arq. Carlos M. Castillo Montes
de Oca. 1944-1945.
Fig. 89 Templo San Miguel Arcngel Cozumel, Quintana Roo. Arq. Carlos M. Castillo
Montes de Oca, Ing. Quezada y Arq. Flix Mier y Tern Lejeune, 1945-1946.
Fig. 90 Interior templo San Miguel Arcngel Cozumel, Quintana Roo.
Fig. 91 Templo de Nuestra Seora de Ftima, Mrida. Ings. Ulises Gonzlez Torre y
lvaro Ponce Pen. 1952-1956.
Fig. 92 Interior templo de Nuestra Seora de Ftima, Mrida. Ings. Ulises Gonzlez
Torre y lvaro Ponce Pen.
Fig. 93 Templo de la Sagrada Familia, Mrida. Arq. Enrique Manero Pen. 1952.
Fig. 94 Interior templo de la Sagrada Familia, Mrida. 1952.
Fig. 95 Santuario del Santo Nio de Atocha, Col. Sarmiento, 1961, imagen tomada
del Diario de Yucatn, el 27 de octubre de 1962. Arq. Flix Mier y Tern Lejeune.
Fig. 96 Interior santuario del Santo Nio de Atocha, Col. Sarmiento.
Fig. 97 Santuario del Sagrado Corazn de Jess, Col. Alemn. 1962. Arq. Enrique
Manero Pen.
Fig. 98 Interior santuario del Sagrado Corazn de Jess, Col. Alemn.
Fig. 99 Capilla de la Santsima Trinidad, Col. Castilla Cmara, 1965. Ing. Mario
Duarte Carrillo.
Fig. 100 Interior Capilla de la Santsima Trinidad, Col. Castilla Cmara.
Fig. 101 Capilla San Judas Tadeo, Col. Daz Ordaz, 1965. Ing. Mario Duarte Carrillo.
Fig. 102 Interior Capilla San Judas Tadeo, Col. Daz Ordaz.
Fig. 103 Capilla de la Casa de la Cristiandad, Chuminpolis. 1965. Arq. Fernando
Lpez Escalante.
Fig. 104 Interior Capilla de la Casa de la Cristiandad, Chuminpolis.
Fig. 105 Iglesia de San Francisco, Fracc. Jardines de Mrida, imagen tomada del
Diario de Yucatn, el 4 de octubre de 1970.
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Listado de planos
Plano 1. Avenidas, colonias y fraccionamientos construidos en la dcada de
los aos cuarenta.
Plano 2. Equipamiento de salud construido en la dcada de los aos cuarenta,
acciones que se sumaron a la consolidacin de esa va y zona de la ciudad.
Plano 3. Equipamiento industrial construido en la dcada de los aos cuarenta.
Plano 4. Equipamiento urbano construido en la dcada de los aos cuarenta,
en la ciudad de Mrida.
Plano 5. Avenidas, colonias y fraccionamientos construidos en la dcada de los
aos cincuenta.
Plano 6. Equipamiento de salud en la dcada de los aos cincuenta.
Plano 7. Equipamiento de educacin en la dcada de los aos cincuenta.
Plano 8. Equipamiento industrial en la dcada de los aos cincuenta.
Plano 9. Equipamiento urbano construido en la dcada de los aos cincuenta
en la ciudad de Mrida.
Plano 10. Colonias y fraccionamientos construidos en la dcada de los aos sesenta.
Plano 11. Vas de comunicacin dcada de los aos sesenta.
Plano 12. Equipamiento de salud construido en la dcada de los aos sesenta.
Plano 13. Plano de equipamiento educativo dcada de los aos sesenta.
Plano 14. Equipamiento urbano comercial: Mercados y supermercados en la ciudad
en la dcada de los aos sesenta.
Plano 15. Equipamiento Industrial en la ciudad en la dcada de los aos sesenta.
Plano 16. Equipamiento hotelero construido en la dcada de los aos sesenta.
Plano 17. Equipamiento urbano construido en la dcada de los aos sesenta
en la ciudad de Mrida.
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