Feito, Rafael. Teorías Sociológicas de La Educación. Universidad Complutense de Madrid.
Feito, Rafael. Teorías Sociológicas de La Educación. Universidad Complutense de Madrid.
Feito, Rafael. Teorías Sociológicas de La Educación. Universidad Complutense de Madrid.
(RAFAEL FEITO)
Aunque seguramente se podran detectar mayor nmero de marcos interpretativos de la
educacin desde la sociologa, aqu nos centraremos en cinco grandes paradigmas clsicos:
los enfoques funcionalistas (que arrancaran de Durkheim), los marxistas, los weberianos,
los interpretativos y, por su imposible encasillamiento en uno u otro paradigma y la
trascendental importancia de sus aportaciones, la obra de Bourdieu. Al considerar tan solo
estos paradigmas clsicos, quedan fuera de esta introduccin enfoques actuales como el
post-modernismo, el feminismo, el multiculturalismo y un largo etctera.
sirve a la sociedad en lugar de a los individuos, a las necesidades generales del organismo.
Esencialmente significa que el socilogo debe considerar qu papel desempea cualquier
fenmeno social en el mantenimiento del orden y de la estabilidad social. En el libro
Educacin y sociologa encontramos la tpica explicacin funcional de Durkheim. Aqu se
define a la educacin como la influencia de las generaciones adultas sobre aquellos aun no
preparados para la vida. La primera funcin de la educacin no es el desarrollo de las
habilidades y potencialidades de cada individuo, sino que consiste en el desarrollo de
aquellas capacidades y habilidades que precisa la sociedad.
Todas las sociedades tienen necesidad de una cierta especializacin. Una de las funciones
de la educacin es preparar a la gente para el medio particular al que estn destinados. No
obstante, todas las formas de educacin contienen un ncleo comn que reciben todos los
nios (educacin bsica). Toda sociedad precisa una similitud bsica de pensamiento,
valores y normas entre sus miembros para perseverar en la existencia.
1.2. PARSONS
De acuerdo con Parsons uno de los hechos claves de la modernizacin es la revolucin
educativa. Una de las caractersticas fundamentales de esta revolucin es la inmensa
extensin de la igualdad de oportunidades. Sin embargo, esta igualdad de oportunidades
acarrea diferencias de logro, las cuales provienen del hecho que los individuos son distintos
en lo que se refiere a su habilidad, sus orientaciones familiares -diferentes aspiraciones y
actitudes en la familia con respecto a la educacin- y sus motivaciones individuales variaciones en el nivel de inters en la educacin y en el deseo de los alumnos de ser
aplicados y trabajar duro. Las diferencias en el logro educativo introducen nuevas formas
de desigualdad, dado que las credenciales educativas determinan el empleo que se termina
por ocupar.
La principal funcin del sistema educativo es legitimar esas desigualdades, lo que se
consigue a travs del proceso de socializacin. La educacin extiende la ideologa de la
igualdad de oportunidades y del logro, y esta ideologa es uno de los elementos clave de la
cultura comn que existe en las sociedades modernas.
En el aula todos los alumnos empiezan desde el mismo punto de partida. Sin embargo,
Parsons admite que las diferencias relativas a los roles sexuales son anteriores a la escuela y
algunos alumnos tienen una mayor grado de independencia que otros. Por independencia
quiere significar el grado de auto-suficiencia del alumno con respecto al profesor, su
capacidad de asumir responsabilidades.
Cuando acceden a la escuela todos los alumnos son tratados del mismo modo: se les
asignan los mismos deberes y son evaluados siguiendo criterios objetivos. Gradualmente
los alumnos son diferenciados a partir del logro: unos rinden ms que otros. Hay dos tipos
de logro que se deben obtener en la educacin. Uno es el aprendizaje puramente cognitivo
de informacin y destrezas y el otro es lo que se puede llamar aprendizaje moral, el cual
implica el ejercicio de una ciudadana responsable en la comunidad escolar.
En su famoso artculo "El aula como sistema social" estudia la escuela en su doble faceta de
rgano de socializacin y de rgano de distribucin de los recursos humanos o de mano de
obra. El criterio utilizado por la escuela para hacer esa doble operacin es distinto al de la
familia: es el criterio del rendimiento. Por este motivo, el mundo de la escuela supone para
el alumno una ruptura de las reglas de juego que hasta entonces le haban sido aplicadas. La
familia est estructurada, funciona, sobre la base de elementos biolgicos: sexo, rango de
nacimiento, edad, elementos descriptivos que chocan con las reglas del funcionamiento
escolar. La familia trata incondicionalmente al nio. Es decir, el nio es valorado y querido
por el mero hecho de pertenecer a la familia. Sin embargo, la escuela anticipa al nio cmo
va a ser tratado por la sociedad y su cometido consiste en que el nio internalice esas reglas
de juego, que se entrene en su ejercicio, y que compruebe los efectos de su aplicacin. Este
trato que por primera vez recibe el nio, puede constituir una fuente de tensiones internas,
las cuales pueden resultar aliviadas en virtud de una serie de mecanismos, como son el
apoyo familiar, la imparcialidad del profesor, el carcter maternal de la profesora (sic) para
con los nios ms pequeos y por el trato con el grupo de amigos.
El profesor es el representante de la sociedad adulta y tiene expectativas difusas con
respecto al futuro acadmico de sus alumnos. Los componentes cognitivos de la instruccin
no pueden separarse de los morales y la diferenciacin gradual ser consecuencia de los
resultados acadmicos. Este proceso lleva a una jerarqua acadmica a partir de las
calificaciones y constituye un criterio clave para la asignacin de estatus futuros en la
sociedad. El hecho de que el profesorado en primaria sea mayoritariamente femenino
implica que la profesora compagina el rol de madre con el de profesora, complementando
de este modo los aspectos cognitivos con los emocionales. Sin embargo, privilegiar el
aspecto cognitivo, dado que su papel consiste en legitimar la diferenciacin de sus alumnos
a partir de su xito acadmico. El tamao de la clase le impide tratar a los alumnos de un
modo particularista, forzando la adopcin de normas universales de tratamiento y de
evaluacin. La rotacin de profesores cada ao contribuye a eliminar la tendencia hacia la
intimidad o el particularismo. Con el cambio de profesores el alumno aprende a distinguir
el rol del profesor de la personalidad de este.
El proceso selectivo promovido por la escuela coloca a los nios en una situacin novedosa
para ellos. Esta situacin se define por cuatro caractersticas.
1.
2.
3.
4.
Igualdad formal de los nios ante el maestro y ante el rgimen de competencia entre
ellos. Parsons insiste en que la escuela no solo valora el rendimiento puramente
intelectual. Un buen alumno internaliza los valores escolares y los materializa en un
correcto comportamiento.
Los nios tienen que realizar una serie de tareas completamente afines y no tareas
desiguales, como ocurre en el trabajo de los adultos. Por esta razn la situacin de
competencia es ms aguda que la vivida en el mundo de los adultos.
Se da una clara bipolarizacin entre la esfera de los adultos, representada por el
profesor, y la esfera de los escolares. El logro de una buena identificacin con el
profesor es determinante de la carrera escolar: quienes lo consiguen tienen mayores
posibilidades de llegar a la universidad; quienes, en cambio, se identifican ms con sus
compaeros o grupos de iguales es ms probable que abandonen los estudios.
Los alumnos son evaluados sistemtica, peridica y formalizadamente.
pblico o cdigo elaborado es un lenguaje para ser utilizado entre iguales, el cual choca con
la jerarquizacin escolar. El intento de sustituir un uso diferente del lenguaje crea
problemas crticos para el nio de clase obrera dado que es un intento de cambiar su
sistema bsico de percepcin.
El siguiente cuadro da cuenta de las principales caractersticas de ambos cdigos.
CDIGO ELABORADO
1. Precisin de la organizacin gramatical
y de la sintaxis
2. Matices lingsticos vehiculados por
una
construccin
de
la
frase
gramaticalmente
compleja,
y
especialmente por la utilizacin de una
serie
de
conjunciones
y
de
proposiciones subordinadas;
3. Uso frecuente de las preposiciones, las
cuales indican las relaciones lgicas, as
como de preposiciones que indican la
proximidad espacial y temporal.
4. Uso
frecuente
de
pronombres
impersonales: "Se puede afirmar..."
5. Eleccin rigurosa de los adjetivos y de
los adverbios
CDIGO RESTRINGIDO
1. Uso frecuente de frases gramaticalmente
simples, cortas, a menudo sin acabar;
una construccin sintctica pobre con
una forma verbal que expresa el estado
de nimo.
2. Uso simple y repetitivo de conjunciones
(porque, entonces...)
3. Uso frecuente de preguntas y rdenes
cortas.
4. Uso limitado y rgido de adjetivos y
adverbios.
5. Uso
infrecuente
de
pronombres
personales.
6. Frases formuladas como preguntas que
establecen una circularidad simpattica,
v.g.: no, verdad.
7. Una afirmacin de hecho se utiliza tanto
como razn como conclusin, o mejor
dicho, la razn y la conclusin se
confunden para producir una afirmacin
categrica: "Haz lo que se te dice, no
vas a salir, porque lo digo yo...
8. Uso de frases idiomticas.
Lo que Bernstein sugiere es que si observamos las relaciones de trabajo de este grupo
particular, sus relaciones en la comunidad, sus sistemas de roles familiares, es razonable
argumentar que los genes de la clase social provienen en menor medida de un cdigo
gentico que de un cdigo de comunicacin que la propia clase social promueve. Tal
cdigo de comunicacin enfatizar verbalmente lo comunal en lugar de lo individual, lo
concreto en lugar de lo abstracto, el aqu y el ahora ms que la investigacin de los motivos
y propsitos.
Una crtica implcita -dado que no lo interpela directamente- a los planteamientos
lingsticos de Bernstein puede encontrarse en los trabajos del sociolingista
norteamericano Labov. Labov se propuso comparar los discursos de hablantes de clase baja
y de clase media. Para ello lo que hizo fue acudir, provisto de una grabadora y de unos
refrescos, a las aceras del Bronx donde departi con nios de raza negra sobre diferentes
cuestiones como la existencia de pluralidad de dioses, el mal, etc. De acuerdo con Labov, lo
que se pudo detectar all fue un ejemplo de lo que denomin verbalidad, frente a la
verbosidad de que suelen hacer gala los hablantes de clase media. He aqu algunos
fragmentos de las conversaciones mantenidas por uno de los colaboradores de Labov con
Larry H. de 15 aos de edad.
JL.: Qu te suceder cuando mueras? Lo sabes?
Larry: S, lo s.
JL: Qu?
Larry: Cuando te ponen bajo tierra, tu cuerpo se convierte en -ah- huesos y mierda.
JL: Qu le sucede a tu espritu?
Larry: Tu espritu -nada ms morir tu espritu te abandona.
JL: Y a dnde va tu espritu?
Larry: Bueno, depende.
JL: De qu?
Larry: Mira, como dicen algunos, si eres bueno y mierda, tu espritu va al cielo... y
si eres malo, tu espritu va al infierno. Mierda! Tu espritu va al infierno de todos
modos, seas bueno o malo.
Larry: Por qu?
Larry: Por qu? Te voy a decir por qu. Porque nadie sabe realmente si existe dios,
sabes, porque yo he visto dioses negros, dioses rosas, dioses blancos, dioses de
todos los colores y nadie sabe si realmente dios existe. Y cuando dicen que si eres
bueno vas al cielo, mierda, porque no vas a ir a ningn cielo, porque no hay cielo
adonde ir.
Larry es un hablante tpico del ingls no estndar. Su gramtica -lo que est claro en el
ingls original- presenta muchos ejemplos de rasgos tpicos del ingls no estndar.
2. ENFOQUES MARXISTAS
Estos enfoques tienen en comn el considerar que el sistema educativo es una institucin
que favorece a las clases sociales privilegiadas, de modo que la escuela se convierte en una
institucin que justifica las desigualdades previamente existentes. Aqu vamos a considerar
las aportaciones de Marx, las teoras de la reproduccin social y las teoras de la resistencia.
2.1. MARX
Marx apenas reflexion explcitamente sobre la educacin. Es en su antropologa,
especialmente en su reflexin sobre el hombre total, donde podemos encontrar el soporte
terico de sus planteamientos educativos explcitos: el aunar educacin y trabajo, la
fascinacin por la gestin democrtica de las escuelas, etc. Marx se opona tajantemente a
la divisin capitalista del trabajo. Al igual que Adam Smith era consciente de que la
parcelacin de tareas laborales limita el desarrollo personal. En El capital afirmaba que
parcelar a un hombre equivale a ejecutarlo.
la escuela de saberes abstractos. No se trata tanto de que los nios produzcan, como de que
estn en contacto con el mundo real, que sean capaces de vincular los conocimientos
adquiridos en la escuela con el mundo de la produccin.
La cosa es sencilla. Los alumnos que pasan en la escuela medio da solamente mantienen
constantemente fresco su espritu y en disposicin casi siempre de recibir con gusto la
enseanza. El sistema de mitad trabajo y mitad escuela convierte a cada una de estas tareas
en descanso y distraccin respecto de la otra, siendo por tanto mucho ms convincente que
la duracin ininterrumpida de una de ambas.
Los inspectores de fbricas descubrieron rpidamente que los nios que seguan el rgimen
de media enseanza aprendan tanto, y a veces ms, que los alumnos de las escuelas
corrientes. Como deca Lerena la proposicin marxiana de unir enseanza y produccin no
solo no es original, sino que ni siquiera constituye una proposicin: era un hecho desde el
movimiento de las escuelas industriales de fines del siglo XVIII. Owen, por ejemplo, lo
haba puesto en marcha en New Lanark.
por Marx y Engels, para los cuales la fuerza de trabajo era homognea, si exceptuamos los
escritos de Engels referidos a la aristocracia obrera. Althusser sostiene que a diferencia de
las formaciones sociales caracterizadas por la servidumbre, la reproduccin de las destrezas
de la fuerza de trabajo tiene lugar preferentemente fuera del lugar de trabajo y se adquieren
mayoritariamente fuera de la produccin: por medio del sistema educativo capitalista. Las
escuelas ensean a los nios diferentes normas de comportamiento dependiendo del tipo de
empleo que vayan a ocupar. La reproduccin de la fuerza de trabajo no es solo la
reproduccin de sus destrezas sino tambin la reproduccin de su sujecin a la ideologa
dominante.
Cmo se asegura la reproduccin de las relaciones de produccin? En su mayor parte se
asegura por medio de los aparatos ideolgicos del estado (AEI). Cuando estos no son
suficientes se produce la intervencin de los aparatos represivos. A diferencia de los
aparatos represivos, los cuales estn constituidos por las fuerzas represivas (ejrcito y
polica), existe una pluralidad de aparatos ideolgicos, los cuales son los siguientes: el AIE
eclesistico (las diferentes iglesias); el AIE escolar (escuelas pblicas y privadas), el AIE
familiar, el AIE jurdico, el AIE poltico (el sistema poltico, incluyendo en l a los
diferentes partidos), el AIE sindical; el AIE de los medios de comunicacin (TV, prensa,
radio,...) y el aparato cultural (literatura, artes, deportes...).
Hay una relativa continuidad entre la secundaria acadmica y el grado superior de las
facultades; pero no hay ninguna continuidad entre la primaria y la enseanza profesional.
Se trata de redes de escolarizacin totalmente distintas por las clases sociales a las que
estn masivamente destinadas, por los puestos de la divisin del trabajo a las que destinan y
por el tipo de formacin que imparten. La enseanza profesional de primer grado no
desemboca en la secundaria y en el ciclo superior, sino en el mercado de trabajo. La
prolongacin de la escolaridad obligatoria no acaba con la divisin en clases, ms bien las
agrava. La operacin es simple: consiste en re-introducir o en mantener en el aparato
escolar a los individuos que anteriormente estaban excluidos o ya haban salido.
La existencia de estas dos redes supone dos tipos de prcticas escolares claramente
diferenciadas.
"La red primaria-profesional est dominada por su base (el elemento primario) y la red
secundaria-superior por su fin (el elemento superior).
Las prcticas escolares de la red profesional son prcticas de repeticin, de insistencia y
machaqueo, mientras que las prcticas de la secundaria acadmica son prcticas de
continuidad, progresivamente graduadas.
Mientras que la red profesional tiende ante todo a "ocupar", a cuidar a sus alumnos de la
manera ms econmica y menos directiva posible, la red secundaria superior funciona en
base a la emulacin y a la seleccin individual.
En tanto que la red profesional coloca en primer plano la observacin de lo "concreto" a
travs de la "leccin de las cosas", la red acadmica reposa en el culto del libro y de la
abstraccin".
El siguiente cuadro trata de sintetizar estos aspectos.
Objetivo
Practicas Escolares
Medios
Prioridad Para
Contenido
PRIMARIA-PROFESIONAL
Reproduccin del Proletariado.
De Repeticin.
Ocupar a los alumnos del modo
ms econmico posible
(pedagogas activas).
La observacin de lo pseudoconcreto (lecciones de cosas).
Subcultura pequeo-burguesa
que dispone a la aceptacin de
la dominacin de clase.
SECUNDARIA-SUPERIOR
Reproduccin de la Burguesa.
De Graduacin Positiva.
Emulacin y Seleccin.
A los futuros proletarios se les imparte un cuerpo compacto de ideas burguesas simples.
Los futuros burgueses aprenden, a travs de toda una serie de aprendizajes apropiados a
convertirse en intrpretes, en actores e improvisadores de la ideologa burguesa.
1. Los estudiantes, al igual que los trabajadores con respecto a su trabajo, ejercen poco
control sobre el curriculum.
2. La educacin es contemplada como un medio, ms que como un fin en s misma.
3. La divisin del trabajo, que confiere a cada persona una estrecha gama de tareas y que
engendra la desunin entre los trabajadores, se repite en la especializacin y
compartimentacin del conocimiento y en la competencia entre los estudiantes.
4. Los distintos niveles educativos se corresponden con, y preparan para, los diferentes
niveles de la estructura ocupacional. De este modo los empleos a que dan acceso las
credenciales de primaria son repetitivos y claramente subordinados. Desde la secundaria
se accede a empleos con mayor grado de autonoma. Y con los ttulos universitarios se
puede acceder a empleos con una elevada autonoma.
Los autores tratan de sustantivar estos puntos centrndose en varias investigaciones que
muestran que en la educacin y en el trabajo se recompensan los mismos tipos de rasgos de
personalidad. De este modo, la creatividad y la independencia se penalizan en las escuelas y
se desaprueban en el trabajo; mientras que la perseverancia, la dependencia, la
identificacin con la organizacin, la puntualidad se aprueban y recompensan.
la escuela estropean la bicicleta del guardia. Las visitas exteriores son una pesadilla para los
profesores. Hay una diversin en las peleas, en la intimidacin, en hablar de peleas. Se trata
de un elemento de masculinidad. Resulta desastroso negarse a pelear cuando hay que
hacerlo. Se prefiere, por lo general, la violencia simblica o verbal.
Ser un "colega" en la escuela est asociado con estar fuera por la noche. Los "colegas"
necesitan urgentemente trabajar en chapucillas para conseguir dinero. Otros recursos para
obtener dinero son los robos, los "palos" a los pringaos o incluso asaltar la escuela. Estn
orgullosos del dinero que ganan -en pequeos trabajillos- y gastan. Todo esto les suministra
un sentido de superioridad ante los profesores, quienes estn encerrados en la escuela y no
saben bien qu ocurre fuera de ellas.
Una de las caractersticas distintivas de la cultura contra-escolar es su acendrado sexismo.
Las mujeres son contempladas con objetos sexuales y como seres hogareos (entre los
"colegas" son abundantes las historietas lascivas sobre conquistas sexuales).
La cultura contra-escolar tiene profundas similitudes con la cultura a la que sus miembros
estn destinados: la cultura de fbrica. La masculinidad y la rudeza en la cultura contraescolar reflejan uno de los temas centrales de la cultura de fbrica. Otro tema de la cultura
de fbrica es la lucha por obtener un cierto grado de control informal sobre el proceso de
trabajo. El grupo informal en el trabajo muestra la misma actitud hacia los conformistas.
El rechazo de la escuela por parte de los "colegas" tiene su correspondencia en la mayor
valoracin de la prctica frente a la teora. La habilidad prctica est siempre en primer
lugar y es una condicin para las otras clases de conocimiento. La teora es til en la
medida en que ayude a resolver problemas, a hacer cosas concretas.
Willis analiza la transicin de un grupo de alumnos marcadamente anti-escuela desde el
sistema educativo al sistema productivo. Lo que quiere explicar es por qu estos chavales
desean realizar trabajos de clase obrera. Para ello elabora un marco terico y una
terminologa que capte lo que ocurre en la realidad. Los trminos clave que utiliza son los
de penetracin y limitacin. Por penetracin entiende los impulsos dentro de una forma
cultural hacia la captacin de las condiciones de existencia de sus miembros y su posicin
dentro del todo social, de un modo no individualista. Se trata de la captacin de las
contradicciones sociales: explotacin, alienacin, divisin social, etc. Por limitacin
entiende aquellos obstculos, desviaciones y efectos ideolgicos que confunden e impiden
el desarrollo total y la expresin de estos impulsos. Lo que hace la limitacin es restar
peligrosidad a las penetraciones, impidiendo o dificultando la transformacin social.
A partir de estos elementos es posible explicar la entrada libremente aceptada en
determinados trabajos en condiciones que no son libremente elegidas (lo que supone
retomar la idea de Marx de que los hombres hacen la historia libremente en condiciones
que no son libremente elegidas). Hay un momento en la cultura obrera en que la entrega de
la fuerza de trabajo representa al mismo tiempo la libertad, la eleccin y la trascendencia.
Si los chicos de la clase obrera en su camino al trabajo no creyeran en la lgica de sus
propias acciones, ninguna persona ni acontecimiento exterior podran convencerles.
Las principales penetraciones son las que se refieren a la educacin y al empleo. La cultura
contra-escolar manifiesta un fuerte escepticismo con respecto al valor de las credenciales
educativas, y, especialmente con respecto al sacrificio que supone su obtencin: en
definitiva un sacrificio no solo de tiempo muerto, sino de una cualidad de la accin: implica
aceptar la subordinacin. La gratificacin inmediata, no es solo inmediata, es un estilo de
vida. Por otro lado, no est del todo claro que el sacrificio en la escuela conduzca a mejores
empleos.
En segundo lugar, la cultura establece una especie de valoracin de la calidad del trabajo
disponible. La mayor parte del trabajo industrial es un trabajo carente de sentido, alienante,
repetitivo, requiere muy poca habilidad y muy poco aprendizaje. Si bsicamente todos los
trabajos son iguales, si de ellos es prcticamente imposible obtener satisfaccin intrnseca
alguna, por qu molestarse en soportar tantos aos de escuela. Hay una indiferencia casi
total con respecto a la clase particular de trabajo a realizar, siempre y cuando cumpla unos
requisitos culturales mnimos. La lgica interna del capitalismo consiste en que todas las
formas concretas de trabajo estn estandarizadas y que todas ellas contienen el potencial
para la explotacin del trabajo abstracto. La expansin del sector servicios y del sector
pblico pretende hacer creer que existe una mayor amplitud de oportunidades y de variedad
de trabajo para los jvenes. Sin embargo, contra esta afirmacin se puede argumentar que el
modelo capitalista de divisin del trabajo es dominante en todos los sectores de empleo.
Por instinto, la cultura contra-escolar tiende a limitar la entrega de la fuerza de trabajo
(llegar al final del trimestre sin haber escrito una sola palabra, desobedecer a los
profesores,...).
El comportamiento en la escuela de estos chicos refuerza la solidaridad de grupo,
rechazando radicalmente la competitividad que la escuela alienta. La cultura contra-escolar
contrapone la lgica individualista a la grupalista. Para el individuo de la clase obrera la
movilidad en esta sociedad puede significar algo. Sin embargo, para la clase y el grupo en
su conjunto, la movilidad no significa nada. La nica movilidad verdadera sera la
destruccin de la sociedad de clases.
Las principales limitaciones de la cultura contra-escolar son las que se refieren al desdn
por la actividad intelectual y su marcado sexismo. El rechazo de la escuela es tambin el
rechazo de la actividad mental en general. El individualismo no es derrotado por lo que
pueda ser en s, sino por su participacin en la mscara escolar donde el trabajo mental se
asocia a la autoridad injustificada y con ttulos cuyas promesas son ilusorias. Por lo tanto el
individualismo es penetrado a costa de rechazar la actividad intelectual (direccin,
concepcin), lo que facilita la dominacin de clase.
La otra gran divisin que desorienta la penetracin cultural es la que se da entre hombres y
mujeres. Anteriormente hacamos referencia al hecho de que los trabajos aceptables por los
alumnos anti-escuela han de caer dentro de un cierto universo cultural. Estos chicos
rechazan cualquier tipo de trabajo que tenga connotaciones femeninas, o donde no se ejerza
la masculinidad en forma de fortaleza fsica. Esto implica el rechazo absoluto del trabajo de
oficina (al que despectivamente llaman pen-pushing -empujar un lpiz-) y todo lo que se
asimile a ella. El hecho de que no todos aspiren a las recompensas y satisfacciones del
trabajo mental es algo que necesita explicacin. El que el capitalismo necesite esta divisin
no explica por qu se satisface esa necesidad. Un miembro de la cultura contra-escolar solo
puede creer en la feminidad del trabajo de oficina mientras que las esposas, las novias y las
madres sean contempladas como personas limitadas, inferiores o incapaces para ciertas
cosas.
La obra de Willis dio lugar a una amplia controversia. En primer lugar se pona en duda
hasta qu punto pudiera considerarse representativa de la actitud de la clase obrera ante la
escuela. Ms bien se refiere a una clase obrera en trance de desaparicin o de escasa cuanta
numrica: manual del sector industrial. Por otro lado, la divisin entre "pringaos" (los
estudiantes acadmicos) y "colegas" induce a una visin dicotmica de las actitudes de los
alumnos frente a los profesores. Y, finalmente, nos quedara por comprender cules sean las
estrategias de las alumnas y de las minoras tnicas.
3. ENFOQUES WEBERIANOS
Los enfoques inspirados en Weber no han dado lugar a una amplia literatura sobre el tema
de la educacin y cuando lo ha hecho se trata de una reflexin muy vinculada al mbito de
la produccin, de la profesionalizacin, etc. De hecho, lo que aqu veremos, aparte de una
reflexin sobre Weber, es la teora del credencialismo en sus versiones fuerte y dbil. No
obstante, la idea de Weber sobre la burocracia ha tenido alguna proyeccin en el estudio de
la escuela como organizacin racional-burocrtica (lo que ocurre en el estudio de Waller
sobre los maestros).
3.1. WEBER
Weber apenas se ocupa de modo explcito de la educacin. Es, sobre todo, en su sociologa
de la religin donde se ocupa de la educacin, y ello sin apenas mencionarla. Como
adverta Lerena, nicamente el lector ingenuo puede pensar que Weber solo se ha adentrado
de modo ocasional en la educacin. Aqu asistimos fundamentalmente a una sociologa del
poder, a una teora de los aparatos de coaccin psquica. La escuela, la familia y la iglesia,
constituyen asociaciones de dominacin. Por dominacin entiende "un estado de cosas por
el cual una voluntad manifiesta (mandato) del dominador o de los dominadores, influye
sobre los actos de otros (del dominado o de los dominados) de tal suerte que en un grado
socialmente relevante estos actos tienen lugar como si los dominados hubieran adoptado
por s mismos, y como mxima de su obrar, el contenido del mandato".
Lerena seala tres reas de problemas directamente incluibles en el mbito de la educacin:
1. Su teora de la educacin y la homologa que establece entre el aparato eclesistico y los
aparatos educativos, sobre todo, la escuela.
2. Su teora de los tipos de educacin.
3. La problemtica de las relaciones entre escuela y burocracia.
En lo que se refiere a la primera cuestin Weber distingue un tipo particular de asociacin
de dominacin a la que llama asociacin hierocrtica, entendiendo por tal una asociacin
"que aplica para la garanta de su orden la coaccin psquica, concediendo o rehusando
bienes de salvacin". Los bienes de salvacin que concede la escuela son los bienes
culturales. Al igual que hizo en su momento la Iglesia, la escuela establece qu cultura es
legtima, de modo que excluye al resto de las culturas.
El sistema de enseanza aparece cuando se dan cuatro condiciones. (1)Existe un cuerpo de
especialistas permanentes cuyos ingresos, promocin, deberes y conducta profesionales
vienen sometidos a una reglamentacin propia. (2) Se da una pretensin de dominio
universalista: superacin del hogar, del clan y de las fronteras tnico-nacionales. (3) Ese
el caso de los trabajadores de oficina en los Estados Unidos, el porcentaje de empleos que
exige titulacin de secundaria o ms ha pasado de ser el 57% en 1937 al 72% en 1967.
La funcin productiva de la educacin puede sintetizarse en las siguientes propuestas:
1. Los requisitos escolares del trabajo en la sociedad industrial se incrementan
constantemente debido al cambio tecnolgico. Aqu estn implicados dos procesos:
a. La proporcin de trabajos que requiere escasas destrezas disminuye, y
b. Los mismos trabajos exigen ms destrezas.
2. La educacin formal y reglada proporciona formacin, tanto en destrezas especficas
como en las capacidades generales, para los trabajos ms cualificados.
3. Por tanto, los requisitos educativos de los empleos constantemente se incrementan y una
proporcin cada vez mayor de personas ha de pasar ms tiempo en la escuela.
Con respecto a la proposicin 1.a los datos disponibles muestran que este proceso da cuenta
solo de una mnima parte de la elevacin del nivel educativo. En una investigacin del ao
1964 se descubri que el 15% del incremento del nivel educativo en los Estados Unidos era
atribuible a cambios en la estructura ocupacional, el resto era achacable a la elevacin de
los requisitos educativos de los empleos ya existentes. Con respecto a la 1.b ms bien lo
que parece haber ocurrido es que estamos asistiendo a una sobre-educacin de la fuerza de
trabajo.
La propuesta 2 puede dividirse en dos cuestiones: son ms productivos los empleados con
ms titulacin que los que tienen menos? y dnde se aprenden las destrezas laborales, en
la escuela o en algn otro lugar? Con respecto a la primera cuestin, los datos son de tres
tipos.
1. El enfoque del crecimiento del PIB lo que hace es tratar de calcular qu parte de este
incremento se debe a la educacin. Este enfoque cuenta con el inconveniente de la
dificultad que supone distinguir entre el cambio tecnolgico que afecta a la
productividad, los cambios de habilidad de los trabajadores debidos a la experiencia, los
cambios debidos a la educacin y los factores motivacionales asociados a una sociedad
cada vez ms competitiva.
2. Las correlaciones a nivel internacional entre niveles educativos y desarrollo econmico
ofrecen muchas dudas. Por ejemplo, si seleccionamos el grupo de pases ms
desarrollados constituido por Europa y los pases anglosajones se observa que pases que
escolarizan a un menor porcentaje de poblacin tienen una renta per cpita superior a la
media del grupo (por ejemplo, Suecia frente a los EE.UU.).
3. El hecho de partir de una situacin de baja escolaridad y pasar a otra de alta puede, en
determinadas circunstancias, explicar el desarrollo econmico. Por ejemplo, el
incremento de la poblacin con educacin primaria explica el desarrollo econmico. No
est tan claro que ocurra lo mismo para los niveles de secundaria y de universidad.
4. ENFOQUES INTERPRETATIVOS
Hasta ahora, por lo que hemos visto, la actividad cotidiana de los profesores y de los
alumnos est dominada, cuando no dictada, por elementos tales como la sociedad
(Durkheim), las necesidades de la sociedad (funcionalismo), la economa, el sistema de
clases o la ideologa (marxismo). Los enfoques macro contemplan a los seres humanos
como meros productos del proceso de socializacin. La creatividad de la gente queda
ignorada y desaparece su libertad. Son precisamente estos aspectos los que condujeron a un
replanteamiento de la sociologa que se tradujo en la aparicin de las corrientes de carcter
interpretativo, en las cuales el nivel macro es sustituido por el anlisis microsociolgico.
Los enfoques interpretativos pretenden estar ms cerca de las realidades de la vida social.
Uno de los problemas a que tradicionalmente se ha enfrentado la sociologa ha sido el de su
supuesta falta de cientificidad, supuesta ausencia que, especialmente en la produccin
funcionalista posterior a la segunda guerra mundial, pretendi ser compensada por medio
de la introduccin de procedimientos matemticos, con lo que se ignor la capacidad activa
de los sujetos sociales.
pautas de interaccin, los actos sociales que constituan la base de la sociedad humana. La
realidad no es una dato fijo sino que es cambiante a medida que los actores crean nuevos
roles y nuevos significados, definiendo su situacin de diferentes maneras, todas las cuales
son reales para ellos.
La fenomenologa tiende a centrarse en analizar el conocimiento que los actores tienen de
la situacin, particularmente del conocimiento que tienen sobre los dems participantes. Por
ejemplo, un profesor puede interpretar el comportamiento de un estudiante como estpido o
inteligente. Aqu se hara preciso llegar a saber por qu el profesor llega a considerarlo
como lo hace. Quizs aqu el autor ms destacable sea Alfred Schutz. Schutz enfatizaba el
papel activo y creativo del sujeto. La realidad social es un proceso constantemente
reconstruido, es un flujo continuo de experiencia y accin. La realidad es inter-subjetiva, el
mundo no es una parcela particular, sino que es compartida con otros. Pero este mundo
tiene una estructura -es decir, no es atomstico- y est construido en torno a relaciones
sociales que implican varios modelos de comunicacin.
La etnometodologa se preocupa por descubrir los procedimientos que utilizan los actores
para hacer el mundo inteligible. La etnometodologa es el estudio del cuerpo de
conocimientos de sentido comn y de la gama de procedimientos y consideraciones por
medio de los cuales los miembros corrientes de la sociedad dan sentido a las circunstancias
en las que se encuentran, hallan el camino a seguir en esas circunstancias y actan en
consecuencia. Los etnometodlogos se centran en la accin, accin a la que conciben en
tanto implica y entraa un actor reflexivo. Critican algunas teoras sociolgicas, por
ejemplo, el funcionalismo estructural y el marxismo estructural, que consideran al actor
como un "imbcil desprovisto de juicio". Se puede comprender en qu consiste la
etnometodologa a partir de la definicin de Garfinkel. Garfinkel considera que los hechos
sociales constituyen el fenmeno sociolgico fundamental, sin embargo, estos hechos
difieren considerablemente de los de Durkheim. Para este ltimo los hechos sociales son
externos y coercitivos para los individuos. Para Garfinkel los hechos existen a nivel micro.
La etnometodologa se ocupa de la organizacin de la vida cotidiana. Los hechos sociales
son el resultado del esfuerzo concertado de las personas en su vida cotidiana. El orden
social se deriva, al menos parcialmente, de la reflexividad (trmino que debe entenderse
como el proceso en el que estamos todos implicados para crear la realidad social mediante
nuestros pensamientos y nuestras acciones) de las personas. Es decir, los etnometodlogos
rechazan la idea de que el orden se deriva meramente de la conformidad a las normas. Es la
conciencia del actor de sus opciones, as como su capacidad de anticipar cmo van a
reaccionar los otros a lo que ellos dicen y hacen, lo que dispone el orden en el mundo
cotidiano.
Como se puede apreciar la escuela deja de ser considerada como una caja negra. Los
socilogos acuden a su interior para analizar qu procesos tienen lugar. El mtodo de
No solo est construido socialmente el conocimiento, sino que tambin lo estn nuestros
criterios de verdad y de razonamiento vlido. Los conceptos de habilidad y de inteligencia
son productos sociales y el fracaso escolar deriva de este concepto. Los profesores hacen
gala de una concepcin acrtica de la inteligencia y sus supuestos se convierten en profecas
que se cumplen a s mismas. Dicho de otro modo, el xito y el fracaso escolar son el
resultado de la definicin de xito y de fracaso escolar que sustentan los profesores. Se trata
de analizar los significados compartidos e impuestos a los alumnos. Para ello se hace
precisa la proliferacin de estudios de casos. Se pueden ver importantes posibilidades de
investigacin en el anlisis de cmo las disciplinas o asignaturas son construidas
socialmente como conjuntos de significados compartidos y el proceso de negociacin entre
los examinados y los examinadores sobre qu sea una respuesta sensata en un examen. La
preocupacin recae sobre los conceptos que manejan los profesores con respecto a sus
alumnos. Tal y como afirma Whitty la nueva sociologa de la educacin se centra en los
supuestos que se dan por sentados en el mundo de la educacin.
5. PIERRE BOURDIEU
La sociologa de la educacin es uno de los aspectos ms conocidos de la obra de Bourdieu.
En lugar de concebir su trabajo en este campo con una contribucin a un rea especializada
de la sociologa, resulta ms adecuado considerarlo como una extensin de su teora de la
prctica para construir una teora de la violencia simblica, por un lado, y una teora
general de la reproduccin social en las sociedades industriales avanzadas, por otro.
Antes de entrar en la que, sin duda, es su obra cumbre en sociologa de la educacin, La
reproduccin, haremos mencin a una obra previa, de los aos sesenta, titulada Los
estudiantes y la cultura (estas dos obras fueron escritas en colaboracin con Jean Claude
Passeron). Se trata de un trabajo sobre los estudiantes universitarios franceses en la dcada
de los sesenta. Aqu analizan en qu consiste el privilegio universitario y qu es lo que
valora la enseanza superior.
Los estudiantes ms favorecidos aportan hbitos, modos de comportamiento y actitudes de
su medio social de origen que les son enormemente tiles en sus tareas escolares. Heredan
saberes y un savoir faire, gustos y un buen gusto cuya rentabilidad escolar es eficacsima.
El privilegio cultural se hace patente cuando tratamos de averiguar el grado de familiaridad
con obras artsticas o literarias, que solo pueden adquirirse por medio de una asistencia
regular al teatro, a museos o a conciertos.
Diferencias no menos notables separan a los estudiantes, en funcin del medio social, en la
orientacin de sus aficiones artsticas. Sin duda alguna los factores de diferenciacin social
pueden, en algunas ocasiones, anular sus efectos ms ostensibles y el pequeo burgus es
capaz de compensar las ventajas que proporciona a los estudiantes de clase alta la
familiaridad con la cultura acadmica. Cualquier clase de enseanza presupone
implcitamente un conjunto de saberes, una facilidad de expresin que son patrimonio de
las clases cultas
La reproduccin est escrita en un lenguaje oscuro y abstracto. El libro se presenta como
una sucesin de proposiciones y sus correspondientes comentarios. La escuela ejerce una
violencia simblica sobre sus usuarios. La violencia simblica es la imposicin de sistemas
de simbolismos y de significados sobre grupos o clases de modo que tal imposicin se
concibe como legtima. La legitimidad oscurece las relaciones de poder, lo que permite que
la imposicin tenga xito. En la medida en que es aceptada como legtima, la cultura aade
su propia fuerza a las relaciones de poder, contribuyendo a su reproduccin sistemtica.
Esto se logra por medio de la merconnaissance, el proceso mediante el cual las relaciones
de poder se perciben no como son objetivamente, sino como una forma que se convierte en
legtima para el observador. La cultura es arbitraria en su imposicin y en su contenido. Lo
que denota la nocin de arbitrariedad es que la cultura no puede deducirse a partir de que
6. CONCLUSIONES
El impacto de la sociologa de la educacin en la configuracin del sistema educativo actual
es ms bien escaso. Fue bastante potente en la poca de Durkheim. Como vimos su
sociologa contribuy a asentar la poltica educativa de la III Repblica francesa. Ms
recientemente la obra de socilogos como Halsey en el Reino Unido jug un papel decisivo
en la reforma educativa britnica de los aos sesenta.
Hoy en da, especialmente en el caso de la reforma educativa espaola, la sociologa no
parece estar desempeando un papel clave, a pesar de que junto con la pedagoga, la
psicologa y la epistemologa constituye, sobre el papel, uno de los soportes de la
educacin. Sin embargo, el profesorado demanda un anlisis sociolgico del entorno. No
obstante, la sociologa de la educacin no se ha revelado especialmente til en el trabajo
cotidiano del profesor. En general, la sociologa es crtica con la labor del profesor: le
considera un agente del sistema, un "extrao sociolgico", un semi-profesional y otra serie
de trminos que despiertan escasa simpata. Por otra lado, cuando la sociologa ha sido
importante en la formacin inicial del profesorado (cosa que ocurri con la obra de Bowles
y Gintis La instruccin escolar en la Amrica capitalista, buena parte de la cual form parte
de los cursos de formacin del profesorado en la Open University britnica -ms o menos
como nuestra UNED-) se ha convertido en un elemento de desmovilizacin: si la escuela
reproduce desigualdades, si los hijos de obrero muy probablemente seguirn siendo
obreros, etc. lo mejor es quedarse cruzados de brazos ante la potencia de las estructuras
sociales. Se hace cada vez ms preciso que la reflexin sociolgica se convierta en un punto
de apoyo de la tarea docente del profesor, de modo que este se convierta en un intelectual
reflexivo. En parte esta es la lnea de socilogos como Henry Giroux, el cual se apoya en
Freire para elaborar sus propuestas en favor de una pedagoga radical.