ROSARIO SAN FRANCISCO SOLANO 2010

SEAL DE LA CRUZ
+Por la seal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos lbranos Seor, Dios nuestro.
+En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espritu Santo. Amn.
Psame, Dios mo, y me arrepiento de todo corazn de haberos ofendido. Psame por el infierno que
merec y por el cielo que perd; pero mucho ms me pesa porque pecando ofend a un Dios tan bueno y
tan grande como Vos. Antes querra haber muerto que haberos ofendido; y propongo firmemente no
pecar ms y evitar todas las ocasiones prximas de pecado. Amn.
En el 1 Misterio Gozoso contemplamos: LA ANUNCIACIN DEL ANGEL A MARIA Y LA
ENCARNACIN DEL HIJO DE DIOS
El ngel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret, a una virgen
desposada con un hombre llamado Jos; el nombre de la virgen era Mara. El ngel, entrando a su
presencia, le dijo: Algrate, llena de gracia, el Seor est contigo. El ngel aadi: No temas, Mara,
porque has hallado gracia delante de Dios; vas a concebir en el seno y vas a dar a luz un hijo, a quien
pondrs por nombre Jess. l ser grande y ser llamado Hijo del Altsimo. Mara respondi al ngel:
Cmo ser esto, si no conozco varn? El ngel le aclar: El Espritu Santo vendr sobre ti y el poder
del Altsimo te cubrir con su sombra; por eso el que ha de nacer ser santo y ser llamado Hijo de Dios.
Ah tienes a tu parienta Isabel: en su vejez ha quedado esperando un hijo, y la que no poda tener familia,
se encuentra ya en el sexto mes del embarazo; por que para Dios nada es imposible".Entonces Mara
dijo: He aqu la esclava del Seor; hgase en m segn tu palabra.
Seor, gracias por regalarnos a Mara como Nuestra Madre. Desde el momento en que dijo S a
tu llamado, se comprometi a permanecer junto a nosotros.
Que tomemos de ejemplo a Santa Mara y a San Francisco Solano, ejemplos de accin y
misin.
1 Padre Nuestro
10 Ave Maras
1 Gloria
En el 2 Misterio Gozoso contemplamos: LA VISITA DE MARA SANTSIMA A SU PRIMA SANTA
ISABEL
Por esos das, Mara parti apresuradamente a una ciudad ubicada en los cerros de Jud. Entr en
casa de Zacaras y salud a Isabel. Al or su saludo, el nio dio saltos en su vientre. Isabel se llen del
Espritu Santo y exclam con gran voz: "Bendita eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu
vientre". Cmo he merecido yo que venga a m la madre de mi Seor? Apenas lleg tu saludo a mis
odos, el nio salt de alegra en mis entraas. Feliz la que ha credo que se cumpliran las cosas que le
fueron dichas de parte del Seor!
Que al igual que Mara estemos atentos a los que necesitan de nuestra ayuda: a nuestros
familiares, amigos y vecinos. A cada intencin respondamos: Seor, enseamos a estar atentos
a los dems
- Por nuestro pas, para que los gobernantes estn siempre atentos a los que lo necesitan.
Oremos
- Por nuestros vecinos del Valle de la Sala, para que siga creciendo la unin y solidaridad.
Oremos
- Por nuestras familias, para que se mantengan unidas y en paz. Oremos
- Por cada uno de nosotros, para que aprendamos que sin caridad y amor al otro la vida no tiene
sentido. Oremos
1 Padre Nuestro
10 Ave Maras

1 Gloria
En el 3 Misterio Gozoso contemplamos: EL NACIMIENTO DEL NIO JESS EN EL POBRE Y
HUMILDE PORTAL DE BELN
Sucedi que por aquellos das sali un edicto de Csar Augusto ordenando que se inscribiera todo el
mundo. Cada uno iba a su ciudad. Jos subi desde la ciudad de Nazaret, a la ciudad de David, que se
llama Beln, por ser l de la casa y familia de David, para inscribirse con Mara, su esposa, que estaba
embarazada. Y sucedi que, mientras ellos estaban all, se le cumplieron los das del alumbramiento, y
dio a luz a su hijo Jess, lo envolvi en paales y lo acost en un pesebre, porque no tenan sitio en el
alojamiento.
Haba en la misma zona unos pastores, que dorman por all y vigilaban por turno durante la noche su
rebao. Se les present el ngel del Seor, y la gloria del Seor los envolvi en su luz; y se llenaron de
temor. El ngel les dijo: No teman, pues les anuncio una gran alegra, que lo ser para todo el pueblo:
ha nacido hoy, en la ciudad de David, un salvador, que es el Cristo Seor. Encontrarn un nio envuelto
en paales y acostado en un pesebre. Y de pronto se junt con el ngel una multitud del ejrcito
celestial, que alababa a Dios, diciendo: Gloria a Dios en las alturas y en la tierra paz a los hombres que
aman a Dios. Y sucedi que cuando los ngeles, dejndoles, se fueron al cielo, los pastores se decan
unos a otros: Vayamos, pues, hasta Beln y veamos lo que ha sucedido y el Seor nos ha
manifestado. Y fueron a toda prisa, y encontraron a Mara y a Jos, y al nio acostado en el pesebre. Al
verlo, dieron a conocer lo que les haban dicho acerca de aquel nio; y todos los que lo oyeron se
maravillaban de lo que los pastores les decan. Los pastores se volvieron glorificando y alabando a Dios
por todo lo que haban odo y visto, conforme a lo que se les haba dicho. Mara, por su parte, guardaba
todas estas cosas, y las meditaba en su corazn.
San Francisco Solano fue un hombre maravilloso que mision por estos lugares. Naci en 1549
y dedic su vida entera a Dios. Hizo grandes cosas por la gente y su corazn estaba inundado de
amor, caridad y sencillez; al igual que Jess; que eligi el sitio ms humilde para hacerse
presente entre nosotros.
San Francisco mirando el crucifijo deca: "Cmo es esto, dulce Jess mo? T crucificado, y
yo regalado por tus siervos; T desnudo, y yo cubierto; T abofeteado y coronado de espinas, y
yo inundado de consuelos y alegras".
1 Padre Nuestro
10 Ave Maras
1 Gloria
En el 4 Misterio Gozoso contemplamos: LA PURIFICACIN DE LA VIRGEN MARA Y LA
PRESENTACIN DEL NIO JESS EN EL TEMPLO
A los cuarenta das del nacimiento de Jess de la Virgen Mara, cuando se cumplieron los das de la
purificacin de ellos, segn la Ley de Moiss, llevaron a Jess a Jerusaln para presentarle al Seor,
como est escrito en su Ley: Todo varn primognito ser consagrado al Seor, y para ofrecer en
sacrificio un par de palomas o dos pichones, conforme a lo que se dice en la misma Ley para quienes,
por su pobreza, no puedan pagar el precio de un cordero.
Viva entonces en Jerusaln un hombre llamado Simen, que era justo y piadoso, y esperaba la
consolacin de Israel. El Espritu Santo, que moraba en l, le haba revelado que no conocera la muerte
antes de haber visto al Mesas del Seor. Movido por el Espritu, fue al templo; y en el momento de entrar
los padres con el nio Jess, Simen lo tom en brazos y bendijo a Dios diciendo: Ahora, Seor, segn
tu promesa, puedes dejar a tu siervo irse en paz. Porque mis ojos han visto a tu Salvador, a quien has
presentado ante todos los pueblos: luz para alumbrar a las naciones y gloria de tu pueblo Israel. Jos y
Mara estaban admirados de lo que se deca del Nio.
El Seor est con nosotros, demos gracias por su presencia. Digamos: Gracias Seor
- Gracias por esta hermosa vida rodeada de personas que llenan nuestro corazn de cario y amor.
- Gracias por la salud, poca o mucha y por la voluntad de seguir el camino que nos encomiendas.
- Gracias por el trabajo que nos ayuda y dignifica.
- Gracias por sentirte presente en cada maana, en cada flor, en cada rayo de sol.
- Gracias por estar hoy presentes en esta procesin a San Francisco Solano como comunidad
fraterna y unida.

1 Padre Nuestro
10 Ave Maras
1 Gloria
En el 5 Misterio Gozoso contemplamos: EL NIO JESS PERDIDO Y HALLADO EN EL TEMPLO
Mara y Jos iban todos los aos a Jerusaln a la fiesta de la Pascua. Cuando Jess cumpli los doce
aos, subieron todos a la fiesta, segn la costumbre; al volverse, pasados aquellos das, el nio Jess se
qued en Jerusaln, sin saberlo sus padres. Creyendo ellos que estara en la caravana, hicieron un da
de camino. Luego se pusieron a buscarlo entre los parientes y conocidos; pero al no encontrarlo, se
volvieron a Jerusaln en su busca.
Y sucedi que, al cabo de tres das, lo encontraron en el Templo, sentado en medio de los maestros,
escuchndoles y preguntndoles; todos los que lo oan, estaban sorprendidos por su inteligencia y sus
respuestas. Al verlo, su madre le dijo: Hijo, por qu nos has hecho esto? Mira, tu padre y yo,
angustiados, te andbamos buscando. l les dijo: Y por qu me buscaban? No saban que yo deba
estar en la casa de mi Padre? Pero ellos no comprendieron la respuesta que les dio. Jess regres con
ellos a Nazaret, donde continu viviendo sujeto a ellos. Su madre conservaba cuidadosamente todas las
cosas en su corazn. Y Jess progresaba en sabidura, en estatura y en gracia ante Dios y ante los
hombres.
Que al igual que el Nio Jess proclamemos cada da el mensaje de Jess. A travs de gestos
cordiales, ayuda al hermano, buenos consejos, y sobretodo del ejemplo de cada uno. Pensemos en San
Francisco Solano, que entreg su vida por Jess y los dems
Oracin a Cristo

y no sers menos generoso en perdonarme,

Qu tengo yo, Seor Jess, que T no me

pues la mucha sangre que derramaste

hayas dado?

y la acerba muerte que padeciste

Qu s yo que T no me hayas enseado?

no fue por los ngeles que te alaban

Qu valgo yo, si no estoy a tu lado?

sino por m y dems pecadores que te

Qu me merezco yo, si a Ti no estoy unido?

ofenden...

Perdname los yerros que contra a Ti he

Si te he negado, djame reconocerte,

cometido!

si te he injuriado, djame alabarte,

Pues me creaste sin que lo mereciera...

si te he ofendido, djame servirte,

me redimiste sin que te lo pidiera.

porque es ms muerte que vida

Mucho me hiciste en crearme,

la que no est empleada

mucho en redimirme

en Tu santo servicio. Amn.

Seor, que diste a tu iglesia un fervoroso evangelizador en san Francisco Solano, te pedimos
por su intercesin un ardiente deseo de predicar la Palabra de tu Hijo Jesucristo en cada
momento de nuestra vida diaria. Por Jesucristo, Nuestro Seor. Amn
1 Padre Nuestro
10 Ave Maras
1 Gloria

Vamos a rezar por las intenciones del Papa Benedicto XVI

1 Padre Nuestro
3 Ave Maras
1 Gloria
Nos consagramos a la Santsima Virgen rezando el Salve:
Dios te salve, Reina y Madre, Madre de misericordia; vida, dulzura y esperanza nuestra; Dios te salve. A
ti clamamos los desterrados hijos de Eva. A ti suspiramos gimiendo y llorando en este valle de lgrimas.
Ea, pues, Seora, abogada nuestra! Vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos, y despus de este
destierro, mustranos a Jess, fruto bendito de tu vientre. Oh clementsima! Oh Piadosa! Oh dulce
Virgen Mara! Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios, para que seamos dignos de alcanzar las
promesas y gracias de nuestro Seor Jesucristo. Amn