Las Palabras Gangrenas

Fredy Delgado

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Las Palabras Gangrenas
Mas evita profanas y vanas palabreras, porque conducirn ms y ms a la
impiedad. Y su palabra carcomer como gangrena; de los cuales son Himeneo
y Fileto, que se desviaron de la verdad, diciendo que la resurreccin ya se
efectu, y trastornan la fe de algunos. Pero el fundamento de Dios est firme,
teniendo este sello: Conoce el Seor a los que son suyos; y: Aprtese de
iniquidad todo aquel que invoca el nombre de Cristo. 2 Timoteo 2: 16-19.
La gangrena es la muerte del tejido del cuerpo debido a una falta de flujo
sanguneo o una infeccin bacteriana. La gangrena afecta comnmente a las
extremidades, incluyendo los dedos de los pies o de las manos, pero tambin
puede ocurrir en los msculos y rganos internos.
Hay diferentes tipos de gangrena con sntomas diferentes, tales como la
gangrena seca, gangrena hmeda, gangrena gaseosa, gangrena interna y
fascitis necrotizante. Cuando esta ltima afecta a los genitales, se conoce
como gangrena de Fournier.
Cuando la gangrena afecta a la piel, los signos y sntomas pueden
incluirdecoloracin de la piel, dolor severo y una herida que desprende mal
olor.
Respecto a la iglesia hay personas que sus palabras carcomen como estas
gangrenas, personas que buscan contagiar al cuerpo de Cristo que es cada
miembro de la iglesia.
El cuerpo viene a ser como un gran tesoro cuando el ESPIRITU DE DIOS
HABITA EN EL. Cuando una persona del mundo oye la palabra de Dios, la
cree, se convierte, se arrepiente, se bautiza en el nombre de Jess, y es llena
antes o despus de creer con el Espritu Santo, su cuerpo pasa a ser miembro
del CUERPO DE CRISTO. Esto es lo que el apstol Pablo le dijo a la Iglesia
en Corinto: Vosotros, pues, sois el cuerpo de Cristo y miembros cada uno en
particular. (1 Corintios 12:27).
Cada uno de los miembros en particular de la Iglesia tiene muchas funciones,
como pasa anatmicamente con cada miembro del cuerpo, NO todos tiene las
mismas funciones dentro de la iglesia, pero todos son uno, en forma ms
especifica aclara la escritura: As como el cuerpo es uno, y tiene muchos
miembros, pero todos los miembros siendo muchos, son un solo cuerpo, as

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tambin Cristo (1 Corintios 12:12). Pablo nos est diciendo, en esencia,
Mira tu propio cuerpo. Tienes manos, pies, ojos, odos. Ustedes NO son un
cerebro aislado, separado de los otros miembros. Bueno, es lo mismo con
JESUCRISTO. El NO es solamente una cabeza. l tiene un cuerpo, y nosotros
somos parte de sus miembros. Es decir frmanos un solo cuerpo: tambin
nosotros, siendo muchos, formamos un solo cuerpo en Cristo, y cada miembro
est unido a todos los dems. (Romanos 12:5).
Cada uno de los miembros del cuerpo de Cristo estamos unidos entre s, para
ser UNO. Nos unimos unos a otros en el nombre de Jess, para un propsito
maravilloso Unidos en hermandad participando del mismo pan, como
sucede en una familia: El pan que partimos Siendo uno solo el pan,
nosotros, con ser muchos, somos un cuerpo, pues todos participamos de aquel
mismo pan. (1 Corintios 10:16-17).
Estos hermanos gangrenas buscaran afectar al cuerpo de Cristo con sus
comentarios errneas, puede ser criticando mal intencionadamente al hermano
o al ministro de la iglesia. Buscara miles de forma para contagiar a la iglesia.
Como dice Pablo sus palabras son como la gangrena, contagiando las mentes
dbiles, provocando una epidemia en la iglesia de Dios.
No se olvide querido hermano que si uno de los miembros del cuerpo se
enferma o sufre, esto debe tambin afectarnos a nosotros como parte del
cuerpo. Hoy en da hay muchos cristianos insensibles con los miembros de la
iglesia, se enferma un hermano y nadie va a visitarlo, hay hermanos
atribulados por los problemas de este mundo y nadie va a fortalecerlo, hoy
todos buscan es lo suyo, que tristeza. Lo peor es cuando hay discusiones
entre los mismos miembros del cuerpo, parece ser que no hay reconciliacin,
la escritura dice:
y mediante la cruz reconciliar con Dios a ambos en un solo cuerpo, matando
en ella las enemistades. (Efesios 2.16).
As tambin los maridos deben amar a sus mujeres como a sus mismos
cuerpos. El que ama a su mujer, a s mismo se ama. (Efesios 5:28).
Un cuerpo sin el Espritu de Dios est muerto, no tiene valor, no tiene las
marcas del seor Jess: De aqu en adelante nadie me cause molestias;
porque yo traigo en mi cuerpo las marcas del Seor Jess. (Glatas 6:17).

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Es decir no tiene su ESPIRITU, y el cuerpo que no tiene el Espritu de Dios,
no es de l: El que no tiene al Espritu de Cristo, no es de Cristo. (Romanos
8:9).
Los causantes de estas gangrenas realmente nunca pertenecieron a la iglesia,
pues la palabra dice: SALIERON DE NOSOTROS, PERO NO ERAN DE
NOSOTROS
Nos podemos estar preguntando por qu muchas personas que han pasado por
nuestras iglesias no han permanecido firmes en el Camino de Jesucristo. Por
qu muchos han abandonado la Fe? Puede ser porque creyeron las palabras
gangrenas, fueron conducidos a la impiedad:
Salieron de nosotros, pero no eran de nosotros; porque si hubiesen sido de
nosotros, habran permanecido con nosotros; pero salieron para que se
manifestase que no todos son de nosotros 1 Juan 2:19.
La enfermedad se manifest en ellos en sus errores y herejas, en su falsedad.
Pero antes ya haban contagiados a muchos hermanos para que se corrompa
toda la iglesia y haya la divisin en ella.
Pablo dice que Himeneo y Fileto son ejemplo de los hermanos gangrenas,
ellos cayeron de la verdad y se desviaron hacia un burdo error, pretendiendo
que no haba futura resurreccin de los muertos. Algunos piensan que
enseaban que no existe una resurreccin aparte de la regeneracin, pero
cualquiera fuese lo que enseaban, era contrario a las Escrituras y minaba la fe
de algunos. Esos errores deben ser desarraigados y desechados!:
Este testimonio es verdadero. Por eso, reprndelos severamente para que sean
sanos en la fe, no prestando atencin a mitos judaicos y a mandamientos de
hombres que se apartan de la verdad. (Tito 1: 13-14).
manteniendo la fe y buena conciencia, desechando la cual naufragaron en
cuanto a la fe algunos, de los cuales son Himeneo y Alejandro, a quienes
entregu a Satans para que aprendan a no blasfemar. (1 Timoteo 1: 19-20).
Sabemos demasiado bien (por experiencia) cunta tribulacin y escndalo se
producen por la apostasa y desercin de aquellos que en otro tiempo
profesaron tener fe en Cristo. Esto es especialmente cierto en el caso de
aquellos que fueron predicadores y dirigentes de la iglesia. Un hombre o una

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mujer que haya sido considerado como columna en la iglesia, no puede
apartarse del Evangelio sin implicar a otros en su ruina, especialmente a los
dbiles.
Pero no hay motivo para que los creyentes verdaderos se desanimen o sean
excesivamente perturbados, aunque vean apartarse a otros a quienes
consideraban fuertes, pues el fundamento de Dios est firme: Pero el
fundamento de Dios est firme, teniendo este sello: Conoce el Seor a los que
son suyos; y: Aprtese de iniquidad todo aquel que invoca el nombre de
Cristo. 2 Timoteo 2:19.
Hay muchos problemas en la iglesia y algunos se desvan de la fe, pero, no
obstante, el fundamento de Dios est firme. Hay falsos maestros y hay falsas
doctrinas. Predicadores y otros hermanos de renombre han desechado la fe y
la buena conciencia y han naufragado en cuanto a la fe, y han guiado a otros
hermanos a la misma ruina. Si le negremos, l tambin nos negar, pero
Si furemos infieles, l permanece fiel; El no puede negarse a s mismo
(2:12, 13). Dios es fiel a s mismo, a sus promesas y a los que confen en El.
Esa fe es la de los elegidos de Dios, es el don de Su gracia, que tiene a Cristo
como autor, consumador, firme e inconmovible fundamento de Dios. Sus hijos
seremos sostenidos por el poder de Dios y la intercesin de Cristo, y no
seremos derribados por Satans, los falsos maestros y las pruebas de la vida
con esta gran enfermedad de palabras contagiosas:
Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto
es, a los que conforme a su propsito son llamados. Porque a los que antes
conoci, tambin los predestin para que fuesen hechos conformes a la
imagen de su Hijo, para que l sea el primognito entre muchos hermanos. Y a
los que predestin, a stos tambin llam; y a los que llam, a stos tambin
justific; y a los que justific, a stos tambin glorific. Qu, pues, diremos a
esto? Si Dios es por nosotros, quin contra nosotros? Por lo cual estoy
seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ngeles, ni principados, ni potestades,
ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa
creada nos podr separar del amor de Dios, que es en Cristo Jess Seor
nuestro. (Romanos 8: 28-31, 38-39).
El sello o marca puesto a los elegidos de Dios es: Conoce el Seor a los que
son suyos. l los escogi, escribi sus nombres en su libro y no permitir que
perezcan:

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Doy gracias mi Dios en toda memoria de vosotros, Siempre en todas mis
oraciones haciendo oracin por todos vosotros con gozo, Por vuestra
comunin en el evangelio, desde el primer da hasta ahora: Estando confiado
de esto, que el que comenz en vosotros la buena obra, la perfeccionar hasta
el da de Jesucristo (Filipenses 1: 6, 4: 3),
Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen, y yo les doy vida
eterna; y no perecern jams, ni nadie las arrebatar de mi mano (Juan 10:
27-28).
Sin embargo, los que el Padre me ha dado vendrn a m, y jams los
rechazar. Pues he descendido del cielo para hacer la voluntad de Dios, quien
me envi, no para hacer mi propia voluntad. Y la voluntad de Dios es que yo
no pierda ni a uno solo de todos los que l me dio, sino que los resucite, en el
da fina (Juan 6: 37-39).
Por eso, aquellos que por misericordia estamos en el Seor e invocamos con
sinceridad su nombre, apartmonos de toda iniquidad. Tenemos un evangelio
que creer y predicar, un buen y fiel Maestro a quien amar, en quien confiar y a
quien glorificar hasta el fin con nuestra actitud, acciones y palabras.
Pero cuantas cosas eran para m ganancia, las he estimado como prdida por
amor de Cristo. Y ciertamente, aun estimo todas las cosas como prdida por
la excelencia del conocimiento de Cristo Jess, mi Seor, por amor del cual lo
he perdido todo, y lo tengo por basura, para ganar a Cristo (Filipenses 3:78).
Por qu fueron contagiados por la gangrena?
Muchos hermanos se contagian fcilmente por estas palabras gangrenadas,
porque realmente no tienen a Dio :
La Biblia dice en 2da de Juan 2: 9 Cualquiera que se extrava, y no persevera
en la doctrina de Cristo, no tiene a Dios; el que persevera en la doctrina de
Cristo, se s tiene al Padre y al Hijo
Es clara la palabra al afirmar que el que no persevera en la doctrina de Cristo
es porque no tiene a Dios, mucha gente que frecuentan nuestras iglesias
tristemente no tienen a Dios, mucha gente que junto a nosotros tenan

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vivencias que aparentaban exteriormente profundidad espiritual, simplemente
era ficcin religiosa, es triste esto. La Biblia afirma que es porque nunca
tuvieron a Dios. No nacieron de nuevo:
Todo aquel que niega al Hijo, tampoco tiene al Padre. El que confiesa al
Hijo, tiene tambin al Padre (1 Juan 2:23).
Todo aquel que permanece en l, no peca; todo aquel que peca, no le ha
visto, ni le ha conocido. Hijitos, nadie os engae; el que hace justicia es justo,
como l es justo. El que practica el pecado es del diablo; porque el diablo peca
desde el principio. Para esto apareci el Hijo de Dios, para deshacer las obras
del diablo. Todo aquel que es nacido de Dios, no practica el pecado, porque la
simiente de Dios permanece en l; y no puede pecar, porque es nacido de
Dios. En esto se manifiestan los hijos de Dios, y los hijos del diablo: todo
aquel que no hace justicia, y que no ama a su hermano, no es de Dios. (1 Juan
3:6-10).
En aquel da vosotros conoceris que yo estoy en mi Padre, y vosotros en m,
y yo en vosotros. El que tiene mis mandamientos, y los guarda, aqul es el que
me ama; y el que me ama, ser amado de mi Padre, y yo le amar, y me
manifestar l. (Juan 14:20-21).
Todo aquel que cree que Jess es el Cristo, es nacido de Dios; y todo aquel
que ama al que engendr, ama tambin al que ha sido engendrado por l. En
esto conocemos que amamos a los hijos de Dios, cuando amamos a Dios, y
guardamos sus mandamientos. Pues este es el amor a Dios, que guardemos sus
mandamientos; y sus mandamientos no son gravosos. (1 Juan 5:1-3).
Una Segunda razn por la cual se dejaron contagiar es porque no eran de
nosotros:
1ra de Juan 2:19 Salieron de nosotros, pero no eran de nosotros; porque si
hubiesen sido de nosotros, habran permanecido con nosotros; pero salieron
para que se manifestase que no todos son de nosotros
Pero el Apstol Juan expresa que han surgido muchos anticristos y estos han
salido de la iglesia (1ra de Juan 2:18) pero por la sencilla razn que no eran de
la iglesia verdadera de Cristo, porque si en verdad lo hubiesen sido habran
permanecido con la iglesia, estos fueron los falsos maestros que surgieron
dentro de la iglesia, falsos maestros apostatas de la verdad, NO ERAN de la

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iglesia, segn el pasaje anterior NO TENIAN A DIOS, seguramente nos
daremos cuenta que NO TODOS SON DE NOSOTROS.
Aquellos que en verdad han nacido de nuevo se mantienen firmes es la fe, la
comunin y la verdad. La prueba ms fuerte del cristianismo verdadero es la
resistencia. Tan pronto las personas se apartan de la verdad y de la iglesia
quedan desenmascarados sus motivos apstatas (1ra corintios 11:19, 2da
Timoteo 2:12, Marcos 13:13, Hebreos 3:14).
La tercera razn por la cuales fueron contagiados es porque nunca
permanecieron en Dios: El que permanece en Cristo es un hijo de Dios: Es
nacido de Dios:
Dice la Biblia en 1era de Juan 3: 6-10. Todo aquel que permanece en l, no
peca; todo aquel que peca, no le ha visto, ni le ha conocido. Hijitos, nadie os
engae; el que hace justicia es justo, como l es justo. El que practica el
pecado es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto
apareci el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo. Todo aquel que
es nacido de Dios, no practica el pecado, porque la simiente de Dios
permanece en l; y no puede pecar, porque es nacido de Dios. En esto se
manifiestan los hijos de Dios, y los hijos del diablo: todo aquel que no hace
justicia, y que no ama a su hermano, no es de Dios
Mucha gente de nuestras iglesias estn hundidas en la ceguera espiritual, viven
religiosidad, van todos los domingos a la iglesia, son parte de las comisiones
de trabajo dentro de la iglesia, son diconos o lideres dentro de la misma, pero
su vida de testimonio dice lo contrario a lo que el evangelio proclama,
realmente no son nacidos de nuevo, por ello vemos mal testimonio en nuestras
iglesias, porque sencillamente hay gente que practica el pecado.
Dice la Biblia que: Todo aquel que es nacido de Dios, no practica el
pecado. 1 Juan 3:9. Esa es la prueba de que somos salvos e hijos de Dios,
un hijo de Dios no vive practicando el pecado como lo haca en su vida
pasada, un cristiano cae en tentacin, puede ser, pero lucha por vencerla con
las fuerzas de Cristo, con la Armadura de Cristo pelea el da a da, se repone
en arrepentimiento genuino y vence, pero uno que no es hijo de Dios, no
puede vencer el pecado, luego si se congrega en una iglesia de sana doctrina
no podr permanecer mucho tiempo, pues una iglesia de sana doctrina
denuncia el pecado, y eso incomoda a pecador.

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La cuarta razn es porque nunca crey en la salvacin, siendo contagiado por
el poder engaoso de los falsos hermanos y maestros:
Nunca fue salvo, nunca tuvo al Padre, as de sencillo, esta es otra razn por la
cual no se permanece en Cristo, porque nunca se estuvo con Dios y esta es la
razn por la que podemos afirmar que muchos falsos maestros y falsos
apstoles no son de Dios y es ms, se los puede calificar como anticristos
como lo haca Juan en sus cartas pastorales 1ra de Juan 2: 22,23 dice Quin
es el mentiroso, sino el que niega que Jess es el Cristo? Este es anticristo, el
que niega al Padre y al Hijo. 23 Todo aquel que niega al Hijo, tampoco tiene
al Padre. El que confiesa al Hijo, tiene tambin al Padre.
Juan cuando escribe su Carta pastoral de 1ra de Juan, manifiesta una defensa
de la humanidad de Cristo lo cual muchos estaban negando (falsos profetas,
engaadores, anticristos) estos falsos maestros aunque afirmaban la deidad de
Cristo, negaban su humanidad para preservarlo del mal, pero el apstol
Juan afirmaba que Jesucristo haba venido en carne (1ra de Juan 1:2,3).
Estos falsos maestros en su afn de mantener la fe, aceptaron las influencias
de la filosofa, desearon defender a Cristo pero en ese afn carnal propagaron
herejas. Enfermedades de la gangrena.
Cuando uno empieza a aadir cosas que no est en la Biblia, sino en la
filosofa, la psicologa, la sociologa y estas tienen ms fuerza que la Biblia
misma surgen las falsas doctrinas, la intencin parece ser buena para un
nefito de la Biblia, pero al final la Biblia misma, afirma que: Todo aquel
que niega al Hijo, tampoco tiene al Padre, entonces las herejas surgen de
corazones no renacidos de nuevo, las herejas surgen de vidas no
pertenecientes a Cristo, surgen de corazones que tienen al padre de las
mentiras.
Cuidmonos de ser contagiados por estas personas que solo traen
enfermedades al cuerpo de Cristo que es la iglesia de su nombre. Las palabras
gangrenadas pueden apartarte de la salvacin, pueden aprtate de Jess. Pero
si estas firme en la ROCA, nunca podrs ser contagiado.
Dios les siga bendiciendo.
Fredy Delgado
Pastor y Telogo

Fredy Delgado