1

EVALUACIN Y MEDIDA DE LA AGRESIN, LA AGRESIVIDAD

Y LA VIOLENCIA.*

Antonio Andrs-Pueyo1, Meritxell Prez Ramrez, David Gallardo Pujol y Carlos

Garca Forero

Centro de trabajo: Universidad de Barcelona (Facultad de Psicologa, Departamento de

Personalidad, Evaluacin y Tratamiento Psicolgico)
Ciudad: Barcelona
Direccin profesional: Paseo de la Vall de Hebrn, n 171, Facultad de Psicologa,
Edificio Ponent, 6 planta
Correo electrnico: [email protected]
*Trabajo desarrollado en el marco del Proyecto de Investigacin del Ministerio
de Ciencia y Tecnologa del Gobierno de Espaa SECJ2005-09170-C0401/PSIC.

Correspondencia

2.1.- Introduccin
La preocupacin por controlar y reducir los comportamientos agresivos y la violencia ha
llevado a un reciente desarrollo de nuevos estudios empricos y formulacin de modelos
tericos sobre la agresin, la violencia y sus consecuencias (Anderson y Bushman,
2002; Krug, 2002). La intervencin en contextos clnicos y de salud mental, tanto en
adultos como en nios, escolares, laborales, familiares, jurdicos y asistenciales, cada
uno de ellos con sus formas especiales de agresin y violencia (bulliyng, mobbing,
violncia de gnero y familiar) requieren soluciones eficaces en la eliminacin de las
conductas violentas. Para conseguirlo la evaluacin y medida precisa de stos
fenmenos es imprescindible. Paradjicamente la disponibilidad de tcnicas de
evaluacin de la agresin y la violencia es muy limitada (Bobes et al. 2003) y adems
poco especfica (Andres-Pueyo y Redondo, 2007). Por este motivo es frecuente la
utilizacin inadecuada de instrumentos de evaluacin y medida diseados para evaluar
la ira, la hostilidad, la impulsividad, el auto-control y otros similares, en vez de
instrumentos especficos para evaluar la agresividad y la violencia. Todava hoy no se
dispone de un repertorio variado de instrumentos de evaluacin de la agresin y la
violencia2 que tengan un suficiente nivel de adecuacin temtica, calidad y eficiencia,
diseados para esta finalidad y con las garantas propias de las tcnicas psicomtricas
modernas. En este trabajo presentaremos, de forma panormica, la realidad actual en
cuanto a los instrumentos de medida de la agresin y la agresividad, desarrollados desde
el final de la II Guerra Mundial y especialmente en las dos ltimas dcadas. Nos
centraremos en presentar las tcnicas e instrumentos para la evaluacin de la agresin y
la agresividad en adultos sin ocuparnos de la evaluacin en nios y adolescentes.
En este trabajo no se abordar la evaluacin de la violencia porque en el momento
actual sta sufre un desarrollo exponencial (pinsese solamente en la problemtica de la
violencia de gnero) y requerira una extensin de la que no disponemos en este captulo
y, adems, desvirtuara el objetivo del mismo. Hay que aadir que este campo

La urgencia de la intervencin contra cualquier tipo de violencia ha llevado a que en pocos aos se

hayan propuesto numerosos instrumentos de evaluacin de los tipos de violencia que aqu no revisaremos.

profesional todava necesita una estabilizacin de las iniciativas que permita descartar y
conservar aquello que es til de lo que no lo es.
Las tcnicas de evaluacin de la violencia, muchas de ellas de muy reciente propuesta,
se han desarrollado en torno a tipos especficos de violencia entre los que el suicidio, la
violencia familiar, de pareja o de gnero, la violencia escolar y la violencia laboral son
las ms importantes. Estas tcnicas tienen una especial predileccin por la descripcin
de hechos, actos y comportamientos violentos que buscan delimitar la frecuencia y
gravedad de los mismos antes que realizar estimaciones de peligrosidad o diagnsticas.
Recientemente se han desarrollado, en este contexto, tcnicas de prediccin del riesgo
de violencia que son de enorme utilidad en contextos forenses, clnicos, penitenciarios y
de asistencia social (Andres-Pueyo y Redondo, 2007).

2.2.- Agresin, Agresividad, Violencia y otros fenmenos relacionados.

La necesidad de medir, cuantificar, evaluar y valorar la agresin y la agresividad
requieren un punto de partida donde las definiciones de ambos constructos queden bien
planteadas a nivel ontolgico y operacional. Esto an no est bien resuelto porque se
confunden con demasiada frecuencia estos constructos con otros tales como la ira, la
hostilidad o la propia violencia. Para evaluar la agresin y la agresividad se utilizan
instrumentos que se ocupan de otros constructos como son la hostilidad o ira y a
veces simplemente la impulsividad que no son idnticos entre s, a pesar de la
evidente relacin que tienen en determinadas ocasiones como puede ser la agresin
impulsiva o la conducta violenta que sucede en una crisis del Trastorno explosivo
intermitente. Estas confusiones llevan a utilizaciones inadecuadas de procedimientos
de evaluacin de la agresin y el resto de conceptos. Aclararemos primero este
particular de importancia para el resto del captulo.
La agresin hace referencia a cualquier comportamiento dirigido hacia otra persona u
objeto que se realiza con la intencin de producirle lesiones, dao o sufrimiento. El
agresor considera que su conducta producir daos en la vctima y que sta intentar
evitarlos (Berkowitz, 1993; Anderson y Bushman, 2002). La no-intencionalidad, los

daos incidentales, como consecuencia de una conducta no dirigida a hacerlos o la

aceptacin del dao por la victima no son propios de los comportamientos agresivos.
Del mismo modo la violencia, concepto usualmente superpuesto al de agresin, no es un
simple sinnimo de sta. La violencia es una estrategia que, tambin de forma
intencionada, pretende obtener la sumisin de otra persona, dominarla para alcanzar
beneficios directos, inmediatos o indirectos por medio de distintas tcticas. La violencia
puede utilizar la agresin (en sus diferentes formas: directa, fsica, sexual,..) pero
tambin puede ejercerse por medio de la negligencia, la manipulacin y las coacciones,
sus efectos se notan y van desde las simples lesiones y daos fsicos pasando por las
consecuencias psicolgicas y morales hasta la alteracin de los procesos de desarrollo y
adaptacin social de las vctimas (Krugh, 2002). La agresin es una de las tcticas que
la violencia puede emplear para obtener sus fines (Andres-Pueyo y Redondo, 2007).
Muchos autores consideran la violencia como la forma ms extrema de la agresin
fsica (Anderson y Bushman, 2002; Berkowitz, 1993). De hecho ni toda la violencia es
agresin, pensemos en la negligencia, ni toda la agresin es violenta ya que un empujn,
en el contexto de un juego o practicando un deporte, es un acto de agresin pero no
necesariamente es un acto violento. El castigo paterno o educativo no es una accin
violenta si bien es un comportamiento que provoca daos y sufrimiento al que recibe el
castigo. Este tema es objeto de numerosas discusiones y con opiniones cambiantes. Es
cierto que habitualmente se confunden agresin con violencia puesto que sta se asocia
a la agresin fsica grave y simplemente se utiliza como sinnimo. En nuestra opinin
es poco util esta asociacin entre un fenmeno comportamental bien identificable, la
agresin, con un fenmeno ms amplio y complejo, como es la violencia, en que
solamente coinciden entre ambos cuando los utilizamos como calificativos de una
accin (Andres Pueyo y Redondo, 2007). En este plano, el de las acciones concretas, si
que entendemos que accin violenta y agresin coinciden. Considerar la agresin y la
violencia como sinnimos es un error de generalizacin del primero sobre el segundo.
Desde que Berkowitz (1993) analiz el tema de la agresin a fondo se han descrito al
menos dos grandes tipos de agresin: la hostil (que comporta ira, impulsividad y falta de
planificacin en su ejecucin) y la instrumental (fra, no-emocional y premeditada).
Recientemente Anderson y Bushman (2002) han considerado que convendra aadir a

esta distincin otra segn la finalidad y modo de ejercer la agresin en el contexto de los
dos tipos de agresin antes descritos.
La agresin es una conducta y como tal depende, al menos, de dos grupos de factores
que la producen: los situacionales y los individuales. Los primeros suelen denominarse
disparadores o provocadores mientras que los segundos reciben el nombre de
moduladores o predisposiciones. Entre stos debera figurar la agresividad y son los que
realmente anteceden a la conducta agresiva porque son los que detectan, analizan y
comprenden el significado de los estmulos externos generadores del comportamiento
violento. Entre los factores individuales destacan los rasgos de personalidad, las
actitudes y creencias, las intenciones y motivaciones, etc.. Entre los situacionales
incluimos los estmulos irritativos, sociales o biolgicos, las provocaciones, las
frustraciones y muchos otros (Tobea, 2003).
A diferencia de la agresin, la agresividad es una disposicin temperamental que forma
parte del repertorio de caractersticas bsicas de la personalidad de un sujeto. Su
peculiaridad, adems de influir directamente en la ejecucin de conductas agresivas
(dependientes de la situacin), es que aparece muy precozmente en el desarrollo
individual, se mantiene a lo largo de toda la vida con un nivel de estabilidad notable y
es independiente del contexto donde se encuentra el sujeto (Andres Pueyo, 1997).
Adems de la distincin entre agresin, agresividad y violencia, conviene destacar
muchas otras confusiones con otros conceptos como la ira, la hostilidad, etc.. que han
impactado mucho en la comprensin del fenmeno agresivo pero sobre todo en la
medida y evaluacin psicolgica del mismo.
La hostilidad y el odio son sentimientos que canalizan la emocin de la ira hacia un o
varios objetos, sentimientos que suelen ser bastante duraderos y, especialmente como en
el caso del odio, intensos. La ira es una emocin o estado de nimo (enfado) que suele
acompaarse de cogniciones hostiles y gran tensin e irritacin psicofisiolgica. En
muchas ocasiones la ira, especialmente cuando por su duracin e intensidad forma parte
de los ataques de furia, suele acompaar a la agresin como elemento facilitador y se
considera un elemento necesario pero no suficiente de la agresin, ya que en muchas
ocasiones las respuestas de ira, enfado o furia no siempre desembocan en

comportamientos agresivos (Coccaro, 2003). Algo similar ocurre con la hostilidad, un

sentimiento que suele ser ms duradero que los ataques de ira, que se dirige
generalmente a un conjunto de elementos diversos y forma parte de la matriz del
carcter de las personas. La hostilidad predispone, sin gnero de dudas, a la agresin
pero su relacin es probabilstica y es frecuente encontrar correlaciones bajas o medias
entre este sentimiento y la propia conducta agresiva (Buss,A. y Perry,M. 1992.). Ira,
clera, hostilidad y agresin son constructos solapados pero no iguales. Es habitual que
los cuestionarios y auto-informes utilizados para evaluar la agresin incluyan escalas (o
sub-escalas) de ira u hostilidad (como es el caso del BDHI, el AQ,) con lo que estos
constructos se confunden fcilmente. Estas consideraciones conceptuales son
importantes a la hora de analizar como evaluar y medir conceptos tan aparentemente
similares como la agresin, el odio, la agresividad, la hostilidad y la ira.

2.3.- Tcnicas de evaluacin de la agresin y la agresividad por medio del

autoinforme
La evaluacin psicolgica de la agresin y la agresividad utiliza parte del amplio
conjunto de tcnicas de evaluacin propias de la medida de los constructos psicolgicos.
Estas tcnicas se adaptan a las peculiaridades del constructo a evaluar y sobre todo a la
importancia del contexto y finalidad de estas evaluaciones. Generalmente las tcnicas de
evaluacin psicolgica se pueden agrupar en procedimientos tales como los autoinformes y las calificaciones, las entrevistas biogrficas y clnicas y las observaciones
en el medio natural o en condiciones de laboratorio. En general, salvo en contextos de
gran control (centros de internamiento psiquitrico o penitenciario), las tcnicas
observacionales y las de laboratorio se utilizan muy poco, por tanto casi toda la
informacin emprica proviene de auto-informes, entrevistas y calificaciones. En la
tabla que se presenta a continuacin se resumen los procedimientos que comentaremos a
lo largo del trabajo.

Mtodos

Laboratorio

Observacin

Entrevistas

Procedimiento

Instrumentos o tcnicas

Rendimiento controlado y
medidas anlogas

BAM, TAP y PSAP

Observacin en contextos
naturales

OAS, MOAS

Anlisis retrospectivos

LHA

agresin y de la

Cuestionarios de personalidad

EPQ-r; 16Pf5; NEO-PI-R,

agresividad

normal

CPS, MPQ, ZKPQ, TPQ-R..

Cuestionarios clnicos

MMPI, PAI, SCL-90-R

Cuestionarios especficos

BDAQ, AQ

Evaluacin de la

Autoinformes

Otras medidas relacionadas

STAXI-2, NOVACO, BIS-11,

BDIH,

Tabla 1. Resumen de los procedimientos y tcnicas de evaluacin de la agresin y la agresividad

La agresividad, la ira, la hostilidad y otros conceptos relacionados siempre han sido, de

un modo u otro, elementos que se han incluido en la evaluacin psicomtrica de los
rasgos de personalidad. Los cuestionarios de personalidad, desde sus inicios,
contuvieron escalas y subescalas con la intencin de valorar estos constructos. Desde
los primeros cuestionarios de personalidad, como los de H.J.Eysenck o R.B.Cattell,
estas escalas se han incluido con mayor o menor especificidad. Tradicionalmente la
evaluacin de la agresividad y sus constructos relacionados (hostilidad, ira,
impulsividad,) ha formado parte de la evaluacin global de la personalidad mediante
cuestionarios multidimensionales diseados para la evaluacin de la personalidad
normal y tambin para la evaluacin clnica de los trastornos psicopatolgicos.
El tratamiento de la agresividad en los distintos tests de personalidad es variada.
Mientras en algunos tests, como el MPQ (Multidimensional Personality Questionnaire),

el ZKPQ3 (Zuckerman Kulhman Personality Questionnaire) y el EPP (Eysenck

Personality Profiler) o el CPS (Cuestionario de Personalidad Situacional) incluyen
subescalas directamente relacionadas con la agresin y la ira, otros no las incluyen. El
NEO-PI-R, el 16Pf5, el EPQ-R, y el TPQ-R disponen de escalas para evaluar la ira, la
hostilidad, la impulsividad y otros constructos relacionados con la agresin pero no la
agresividad explcitamente. En stos ltimos la medida de la agresividad se deriva de la
combinacin particular de sub-escalas (como en el caso del 16Pf5 o del TPQ-R) o bien
se subsume en la evaluacin global de los rasgos ms genricos, como en el caso del
Psicoticismo o la Cordialidad de los tests EPQ-R y NEO-PI-R respectivamente. En
concreto dos cuestionarios de personalidad, uno de origen y desarrollo espaol, el CPS
y el otro de origen norteamericano y que a pesar de estar adaptado en Espaa no se
distribuye comercialmente, el ZKPQ (versin 3) disponen de escalas propias de
evaluacin de la agresividad.
El CPS (Cuestionario de Personalidad Situacional de J.L. Fernndez-Seara y otros,
1995) est constituido por 17 escalas de personalidad de gran inters prctico en
Psicologa aplicada. Entre ellas encontramos escalas de Ansiedad, Autoconcepto,
Eficacia, Independencia, Control Cognitivo, Ajuste Social, Agresividad, Tolerancia,
Inteligencia Social, Integridad-honestidad, Liderazgo. Consta de 233 elementos de tipo
verdadero-falso, es breve y de fcil aplicacin. Especialmente concebido para uso en el
mbito laboral porque evala la personalidad de los sujetos cuando interactan con el
entorno. La escala de Agresividad esta diseada para la evaluacin de sta disposicion
de personalidad con un nivel de fiabilidad y validez adecuada a su uso prctico y
profesional.
El ZKPQ III (Cuestionario de Personalidad Zuckerman-Kuhlman; Zuckerman y
Kuhlman, 1993) tambin incluye una escala especfica de evaluacin de la agresividad,
en este caso combinada con aspectos de hostilidad. Consta de 99 tems, que evalan los
llamados Cinco Alternativos: Neuroticismo-Ansiedad (19 tems); AgresinHostilidad (17 tems), Actividad (17 tems), Sociabilidad (17 tems) y Bsqueda de

Zotes, J.A. (1999). Cuestionario de Personalidad Zuckerman-Kuhlman (ZKPQIII; 1993). Manuscrito no publicado. Hospital
Ramn y Cajal, Madrid.

Sensaciones Impulsiva No Socializada (19 tems); a estas escalas se aade una de

Infrecuencia, compuesta por 10 tems y encaminada a detectar distorsiones de respuesta.
La escala de AgresinHostilidad (Agg-Host) es una combinacin de la disposicin a
expresarse de forma agresiva y la grosera, desconsideracin, conducta antisocial,
venganza y malicia, o desde el otro polo, disposicin a ser agradable y cordial y tener
un trato amable con las personas.
En nuestra opinin es posible utilizar las subescalas especficas de agresividad y/o de
hostilidad, como las presentadas, teniendo en cuenta los tems que la constituyen y la
clave de correccin original, en evaluaciones que pretenden identificar la predisposicin
a la agresin. Es interesante hacer notar que se pueden segregar los tems de las
subescalas de los tests de personalidad en la investigacin, pero no es recomendable
hacerlo en la prctica profesional cuando queremos, como en el contexto forense o
clnico, evaluar la tendencia a la agresin por parte de un paciente.
No ha sido nada habitual ni corriente utilizar estas subescalas de forma independiente en
la evaluacin de la agresividad en contextos de investigacin y, naturalmente, son un
recurso disponible cuando la muestra a la que hay que valorar la agresividad no es, a
priori, susceptible de administrar pruebas o test psicolgicos de tipo clnico. Nos
referimos a la excesiva tendencia, inadecuada en nuestra opinin, de administrar
siempre y de modo rutinario protocolos o test diseados para evaluacin clnica en
situaciones donde no existe o no hay indicios de que exista patologa que justifique este
uso. Por ejemplo en contextos de seleccin de personal, counseling o similares para
evaluar la personalidad normal (lase la hostilidad o la agresividad) no es necesario
empezar por utilizar un MMPI o un SCL-90-R, ya que las escalas del NEO-PI-R u otro
similar son ms que adecuadas en tanto que exploran el repertorio normal de
expresiones conductuales, afectivas y cognitivas de la agresividad.
Adems, en la misma lnea que el anterior apartado, los tests y cuestionarios de
evaluacin de sntomas o caractersticas psicopatolgicas diseados para aplicaciones
clnicas, tambin incluyen escalas (simples o compuestas) para evaluar la agresividad.
El MMPI y el MMPI-2 permiten hacer estimaciones de la agresividad y contienen tems
relacionados con la agresin en distintas subescalas del mismo (Masculinidad-

10

Feminidad; Desviacin psicoptica e Hipomana) , no es fcil obtener una subescala

nica sino una combinacin o perfil de dimensiones en relacin con la agresividad.
En el MMPI 1 y 2, en el PAI o en el SCL-90-R nos encontramos con escalas que sirven
para evaluar la agresividad, generalmente en expresiones de mayor gravedad o
frecuencia que las de los tests de personalidad normal. Merece la pena destacar, en
este sentido, tanto el PAI como la SCL-90 que incluyen escalas de Agresividad y
Hostilidad de fcil uso. El PAI (Personality Assessment Inventory; Morey, L. 1991)
dispone de una escala especfica, a su vez dividida en tres ms, destinada a evaluar la
agresividad en el plano clnico. El PAI, diseado en los aos 90 por L.Morey es un
inventario de anlisis clnico y psicopatolgico que ha adquirido un gran prestigio
internacional al estar relacionado con los sndromes ms relevantes del DSM-IV, incluir
escalas de control y de valoracin clinica del paciente en temas como la adherencia al
tratamiento, el estrs percibido, etc. Entre estas escalas incluye una propia de
agresividad. Est formada a su vez por tres subescalas: agresin fsica, agresin verbal
y actitudes agresivas que cubren el mbito de la ira, la hostilidad, el comportamiento
agresivo y las actitudes violentas. Asimismo el PAI incluye un indicador combinado, de
enorme inters en evaluacin forense, que se identifica por las siglas IPV cuyo
significado es el de Index of Potential for Violence y que es un gran predictor de la
conducta violenta en poblaciones de enfermos mentales y delincuentes crnicos
(Andres-Pueyo y Jarque, 2005).Tanto la escala de agresividad como el IVP son dos
indicadores adecuados para evaluar la agresividad en contextos clnicos.
El SCL-90-R (Derogatis,L.R. 1994) es un cuestionario autoinformado, diseado para
detectar y medir los sntomas ms habituales de los trastornos mentales y
psicopatolgicos, al estilo de los listados de chequeo, constituido por 90 tems de
respuesta graduada de tipo Lykert (0 ausencia total de los sntomas descritos en el tem4 que refiere a la molestia mxima) y que permite evaluar 10 escalas distintas. Entre
ellas se incluye una que se ocupa de la evaluacin de la Hostilidad , constituida por 6
tems que evalan pensamientos, sentimientos y conductas propias de los estados de
agresividad, ira, irritabilidad, rabia y resentimiento. Esta escala sera un claro ejemplo
de la combinacin heterognea que incluyen muchos test e instrumentos de medida
psicolgicos utilizados en este campo.

11

Como es natural este uso indirecto de los cuestionarios genricos de personalidad o

psicopatolgicos no agota las posibilidades tcnicas de evaluar la agresin y la
agresividad. Diferentes investigadores han desarrollado cuestionarios especficos y
originales para conseguir una medida fiable y vlida, por medio de autoinforme, de la
agresividad. En 1957, Buss y Durkee desarrollaron el Inventario de Hostilidad de Buss
y Durkee (BDHI), un cuestionario que todava se utiliza en la actualidad y que es
referencia en cualquier investigacin sobre agresividad, a pesar de sus limitaciones
psicomtricas. El BDHI (Buss y Durkee Hostility Inventory) es un test
multidimensional que incluye numerosas escalas relacionadas con la agresin y la
agresividad. Consta de 75 tems que se agrupan en 7 subescalas diferentes: Violencia,
Hostilidad indirecta, Irritabilidad, Negativismo, Resentimiento, Hostilidad verbal,
Recelos y Culpabilidad. Cada tem tiene dos opciones de respuesta (verdadero/falso). A
pesar de ser un test clsico es poco conocido y utilizado en nuestro entorno. En 1992
Buss y Perry redefinieron el BDHI para mejorar sus propiedades psicomtricas y el
resultado fue el Buss y Perry Aggression Questionnaire, en la actualidad el Aggression
Questionnaire (AQ), que evala cuatro aspectos de la agresin: a) Agresin fsica , b)
Agresin verbal, que implican daar a otros, representa el componente motor o
instrumental de la conducta agresiva; c) Hostilidad, que consiste en sentimientos de
injusticia o mala voluntad y representa el componente cognitivo de la conducta y d) Ira,
que implica un arousal psicolgico o preparacin para la agresin, que representa el
componente emotivo o afectivo de la conducta agresiva. Tiene un total de 29 tems. La
propuesta inicial de cuatro escalas, proveniente de estudios factoriales exploratorios se
ha visto contrastada por medio de varios estudios de anlisis factorial confirmatorio
(Vigil-Colet y otros, 2005). El AQ se ha adaptado a muchos idiomas y pases
mostrando, en general, buenas propiedades psicomtricas. Los valores de fiabilidad del
AQ estn en torno a valores de 0,75 y 0,80 (Andreu y otros, 2004). La validez de este
cuestionario se ha chequeado en varias ocasiones comparando las puntuaciones en el
cuestionario con criterios como calificaciones de agresividad, impulsividad y
competitividad (evaluada con auto-informes) y otras medidas de conducta (faltas por
ataques en deportes, sanciones, etc.).

12

En 2001, Bryant y Smith revisaron de nuevo esta cuestin y desarrollaron un versin

an ms breve del AQ. Esta nueva versin incluye solamente 12 tems del AQ de Buss
y Perry, menos de la mitad de los 29 tems originales de los que dispona aquel test. Esta
mejora ha hecho posible que se disponga de un cuestionario breve y fiable para ser
utilizado en numerosos contextos aplicados. Por otro lado, el breve nmero de tems de
este test permite incluirlo en amplias bateras de cuestionarios que son frecuentes en
estudios empricos.
Recientemente hemos realizado una adaptacin y baremacin de la versin breve del
AQ en Espaa con el objetivo de proporcionar una herramienta eficiente y fiable, vlida
y til para los profesionales de este mbito (Gallardo-Pujol et al., 2006). Esta vez se
aplic el AQ de 12 tems a tres muestras de sujetos: una submuestra de voluntarios
heterognea (1047 sujetos), otra de alumnos de la Escuela de Polica de Catalua (81
sujetos), y una tercera de agresores condenados a una pena de prisin (140 sujetos). Las
conclusiones principales de este estudio muestran que el AQ reducido, parece ser un
instrumento til para evaluar la agresividad y dems constructos asociados. Estos
resultados apoyan la buena fiabilidad y validez del instrumento, as como la validez de
constructo del AQ en sus cuatro escalas. En segundo lugar se observo que el AQ
mostraba diferencias entre las puntuaciones de hombres y mujeres en las diferentes
subescalas del AQ. Los hombres fueron ms agresivos que las mujeres en la escala de
Agresin fsica, por el contrario, las mujeres fueron ms agresivas que los hombres en
las escalas de Ira y Hostilidad, a pesar que en los estudios originales los hombres ms
agresivos en todas las subescalas menos la de Ira. Por otro lado, la exploracin de las
diferencias entre muestras del estudio mostr que los estudiantes de polica obtenan
sistemticamente puntuaciones ms bajas en las cuatro escalas del AQ, en comparacin
con la muestra general o la muestra de agresores encarcelados. Adems, se encontraron
diferencias entre los agresores y la muestra genrica en las escalas de Agresin fsica y
Hostilidad, consistente con un mayor nivel de agresin por parte de los presos. En
realidad, est constatado que la ira y la hostilidad se encuentra fuertemente relacionada
con la agresin impulsiva, y se han revelado como un factor de riesgo de violencia en
las prisiones.

13

Veamos las ventajas y limitaciones de la evaluacin de la agresin y la agresividad por

medio de auto-informes. Una de las limitaciones de los auto-informes, que afectan de
forma notable a las medidas de agresin, es el sesgo derivado de reconstruir
retrospectivamente la conducta agresiva. Adems a la baja precisin del recuerdo, que
limita la validez de las evaluaciones, se une el hecho de que muchas agresiones se
dieron en momentos de gran excitacin emocional, estados de elevado consumo de
drogas y alcohol y una ms que evidente memoria selectiva de actos socialmente muy
reprobables cuando no punibles, que provocan olvidos entre intencionados y
espontneos que dificultan esta evaluacin. Por tanto es frecuente que los informantes,
por lo general, lo hagan con un sesgo que provoca una reduccin de la frecuencia y la
intensidad de los actos agresivos realizados por ellos mismos. Esta limitacin, que a
veces es determinante para invalidar una evaluacin, es inevitable porque la mayora de
actos agresivos se realiza de forma privada, sin acceso a la observacin pblica y, por
tanto, a veces el autoinforme es el nico camino para obtener este tipo de
informaciones. En consecuencia hemos de basarnos en estudios de fiabilidad en los que
se han comparado auto-informes con evaluaciones conductuales y que nos indican que,
a pesar de estos sesgos, las medidas de auto-informe mantienen unos niveles de validez
suficientes (Geen y Dorenstein, 1998).

2.4.- Registros observacionales del comportamiento agresivo y las entrevistas.

La agresin como comportamiento muestra diferentes formas de ejecutarse y responde,
tambin, a distintas motivaciones. En cuanto a los modos de ejecucin se suelen
distinguir los actos agresivos dirigidos contra las personas, contra los animales y contra
los objetos. Pueden incluir actos fsicos realizados directamente con los miembros del
cuerpo (puetazos, empujones, bofetadas, patadas, mordiscos) o bien realizados con
el concurso de armas (navajas, pistolas, escopetas) u objetos funcionalmente anlogos
a aquellas (cuchillos, palos, piedras, botellas). Se identifican tambin los actos
agresivos verbales (insultos, coacciones, amenazas, etc..) y los sexuales e incluso la
simple presencia amenzante (como pasa en los casos de violencia de pareja con el
llamado acoso no-sexual). En algunas ocasiones se incluyen actos de negligencia u

14

omisin (no dar ayuda ni atender las necesidades de alguin que las necesita, etc) y en
otras ocasiones hasta las auto-lesiones pueden entenderse como un acto agresivo. Esta
variedad y expresividad propia de la conducta agresiva tanto verbal como fsica la
convierte en susceptible de ser registrada y analizada con las tcnicas propias de los
estudios etolgicos, del desarrollo, etc.. y que tan buenos resultados ha dado en la
investigacin psicolgica de la agresin.
Numerosas tcnicas aplicadas a los anlisis etolgicos de la conducta agresiva entre
animales se trasladaron al estudio de la conducta agresiva en nios y adolescentes
realizados en contextos naturales. All se pusieron a punto tcnicas de registro
observacional muy precisas que por medio de grabaciones videogrficas, despus
analizadas por medio de plantillas codificadas de registro de actos violentos, permitan
evaluar en frecuencia y gravedad la conducta agresiva. Muchas de estas tcnicas se
siguen aplicando de forma habitual en contextos institucionales (Anderson y Bushman,
2002).
Recientemente hemos adaptado al castellano la Escala Modificada de Agresion
Manifiesta EMAM (Arbach y Andres-Pueyo, 2007) que es una versin actualizada de
la MOAS de Kay y otros (1988). Esta escala es un protocolo de registro de sucesos de
cuatro categoras: agresin verbal (amenazas, agravios, insultos), agresin fsica
contra la propiedad y el mobiliario (golpear puertas, romper objetos), auto-agresin
(golpes con la cabeza, auto-lesiones menores,) y por ltimo la categora de
agresiones fsicas contra otras personas (empujones, patadas, golpes,.). En esta
plantilla de registro de conducta se anotan, por parte de los observadores entrenados y
en funcin de un intervalo temporal predeterminado: das, horas, semanas, los
sucesos agresivos y la gravedad de los mismos.
La MOAS (Kay et al. 1988) es una versin modificada del OAS (Overt Aggression
Scale) que fue diseada para medir objetivamente las conducta agresivas de los
pacientes psiquitricos en situacin de internamiento. Igual que la MOAS en la OAS se
evalan 4 modalidades del comportamiento agresivo. Para calcular la magnitud de la
conducta agresiva cada uno de los elementos es valorado desde una doble perspectiva:
gravedad y frecuencia. La puntuacin de gravedad se realiza mediante una escala tipo

15

Likert de 5 valores de intensidad, desde 1 (no presenta ese tipo de agresividad) hasta 5
(la gravedad es extrema). La valoracin de la frecuencia se realiza de forma abierta,
indicando el nmero de veces que ha presentado en el mes previo (o intervalo temporal
que se desee) las conductas correspondientes al nivel de gravedad. La OAS era una
plantilla de registro observacional que se convirti, en la MOAS, que en algunas
ocasiones se utiliza con un formato de entrevista retrospectiva. Este nuevo formato, que
no excluye su utilizacin como registro de conducta mediante observadores
cualificados, consiste en agrupar los comportamientos agresivos en gravedad,
frecuencia y tipologa. Los comportamientos se ajustan a cuatro categoras y en cada
categora se organizan de forma jerrquica las conductas segn su gravedad (1: empujar
a otro, 10: intento de estrangulamiento). Esta ponderacin de cada acto agresivo (se
entiende por acto agresivo lo que sucede en un intervalo de 30 min. entre agresiones) se
multiplica por la frecuencia de los actos y nos permite obtener una puntuacin global de
la agresin emitida por un sujeto en un determinado intervalo temporal (das,
semanas,.). Este procedimiento de evaluacin de la agresin se propuso para llenar el
vaco que haba en este tipo de medidas en la prctica profesional de la psiquiatra
clnica. No es muy utilizado y los primeros estudios, no replicados, mostraron una gran
fiabilidad y validez que avalan su utilizacin (Coccaro, 2003; Arbach y Andres-Pueyo,
2007). Es especialmente si lo que se pretende es tener un registro realista del
comportamiento agresivo en pacientes afectados por trastornos mentales o en otro tipo
de sujetos en condiciones de internamiento: presos, discapacitados y otros.
En el contexto clnico, donde en numerosas ocasiones los profesionales se enfrentan a
personas con comportamientos hostiles, agresivos, irritables, etc la evaluacin de la
agresin y la agresividad se confa muchas veces a las habilidades del entrevistador. En
la actualidad no existe ningn protocolo de entrevista para esta finalidad que
conozcamos. Dado el enorme valor que se da a la entrevista sera interesante disponer
de alguna entrevista (estructurada o semi-estructurada) dedicada a valorar la agresin, la
agresividad y dems factores relacionados (ira, enfado, hostilidad, etc) sin embargo
no es as y o bien los entrevistadores optan por hacer su exploracin general o es un
mbito que solamente se analiza cuando estamos frente a casos donde la conducta
violenta es motivo de consulta o en poblaciones penitenciarias y forenses. E. Coccaro ha

16

desarrollado dos entrevistas para este fin, la Life History of Aggression (la nica
entrevista pensada para validar la biografa violenta de un paciente desarrollada
inicialmente por Brow y Goodwin en estudios sobre el suicidio) y la adaptacin de la
Overt Aggression Scale-Modified for Outpatients que puede administrarse en
situaciones clnicas. La primera es til para recopilar la trayectoria agresiva de un
individuo desde su infancia y la segunda tiene una finalidad diagnstica, pero su
utilizacin se ve restringida a la investigacin y no a la prctica clnica habitual.
Ninguna de las dos estn adaptadas al castellano (salvo iniciativas locales o de
investigacin) y sirven para la evaluacin clnica de la conducta agresiva especialmente
en el contexto de la intervencin sobre el Trastorno Explosivo Intermitente (Coccaro,
2003).

2.5.- Tcnicas de evaluacin de la agresin en el laboratorio.

A pesar que la agresin requiere de un contexto social e interpersonal para que se
produzca, las diversas variables implicadas en aquel fenmeno, entre las que destacan
las derivadas de los conflictos e interacciones individuales (choques, peleas,.) pueden
ser reproducidas con cierta fidelidad en un entorno como el laboratorio. La
investigacin experimental de la agresin puede aportar diversas ventajas al estudio de
este fenmeno. La propia naturaleza de la conducta agresiva, que aparece con una baja
frecuencia, que puede implicar dao fsico4 y puede ser difcil de predecir e identificar,
la hace adecuada para su estudio en las condiciones controladas del laboratorio. Por
estos motivos se han desarrollado procedimientos de laboratorio para sortear las
dificultades mencionadas anteriormente. Estas medidas de la agresin en el laboratorio
parten de un diseo experimental que implica una mayor precisin en la evaluacin de
la agresin y una manipulacin de las variables independientes, tales como la frecuencia
de aparicin del estmulo provocador y de las consecuentes respuestas agresivas. Una
ventaja obvia de la evaluacin de la agresin en el laboratorio es que las
interpretaciones de los resultados pueden realizarse en trminos de causalidad y tienen
4

Recuerdese la necesidad de respetar los acuerdos de Deontolgia y Etica en los estudios psicolgicos.

17

una mayor validez interna que los estudios realizados con medidas de autoinforme o por
medio de registros observacionales en contextos naturales.
El procedimiento experimental es considerado el mejor de los posibles para comprender
las causas y mecanismos causales que estn implicados en la conducta agresiva. Pero las
limitaciones ticas y metodolgicas hacen muy difcil aplicar estos procedimientos al
estudio de la agresin humana. Es muy difcil superar el procedimiento del registro
observacional de la agresin espontnea (o inducida) y sta limitacin dificulta su
estudio en situaciones experimentales. Para resolver este problema en los aos 60, y en
el contexto de la investigacin experimental de los efectos del alcohol sobre la agresin
se diseo el conocido Paradigma de la Agresin de Taylor que, consisti en una
modificacin de la llamada Maquina de la agresin de Buss y al ms reciente
Paradigma de la Agresin a causa de la substraccin de puntos- Point Subtraction
Aggression Paradigm (PSAP) desarrollado, y adecuado a la tecnologa de los
computadores que se utilizan actualmente en los laboratorios. El PSAP fue diseado por
D. Cherek y actualmente disponemos de un equipo en el laboratorio del GEAV de la
Universidad de Barcelona.
El elemento comn que tienen las tareas que permiten la evaluacin experimental de la
agresin, desde que Taylor introdujo su tcnica, es que se trata de que un participante
interactue con otro (real, simulado o virtual; en cualquier caso con un nivel de
credibilidad elevado) y que el sujeto experimental emita conductas agresivas que se
puedan registrar con precisin (aqu intervienen el uso de mquinas u ordenadores que
sirven de registradores fiables y continuos de la conducta agresiva- anlogo
experimental a la conducta agresiva real). Las limitaciones experimentales definen la
variedad de conductas agresivas que el sujeto podra realizar pero, por el contrario,
permite observar la intencionalidad del comportamiento agresivo. En general, en estas
situaciones, el sujeto experimental es provocado, sufre frustraciones o perdida de
beneficios que generan su agresin ya que stas prdidas las puede atribuir a la conducta
de una persona (aliado con el experimentador) que sirve de objetivo de las agresiones
del sujeto experimental. Como es bien sabida, esta artificialidad propia de la
investigacin experimental, aporta mucha informacin de validez interna sobre los
mecanismos implicados en la conducta, en este caso, la agresin.

18

En 1961 A.Buss, siguiendo los pasos de S. Milgram y su estudio acerca de la

obediencia, en el que haba diseado un aparato para administrar castigos, construyo un
aparato electromecnico que se llam mquina de la agresin y que permita
administrar castigos (falsos en realidad, pero el sujeto experimental lo desconoca)
mediante unos pulsadores en funcin de las decisiones que ste tomaba segn lo que
otro sujeto (aliado con el experimentador) hacia y que le produca prdidas econmicas
al primero. La frecuencia e intensidad de los castigos elctricos falsos que realizaba
el sujeto experimental se consideraban la medida de la agresin en la situacin
experimental. Despus de esta aportacin, Stuart Taylor, de la Universidad de
Massachusetts diseo un paradigma experimental llamado Tarea del Profesor-alumno
que servia para evaluar la agresin en una situacin donde el sujeto experimental debia
castigar, mediante una descarga elctrica directamente a otro sujeto un aliado del
experimentador que simulaba los efectos del castigo experimental. A partir de esta
tarea Taylor desarrollo otra tarea en la cual dos sujetos (otra vez un aliado y uno
ingenuo) competan por obtener los mejores resultados posibles en una tarea
cronomtrica y mediante distintas consignas, uno de los sujetos poda administrar
castigos al otro en funcin de las interacciones que haba entre ambos. La medida de la
agresin corresponde al nmero e intensidad de los castigos que administraba el sujeto
experimental. La tarea de Taylor, conocida como el Taylor Aggression Paradigm se
convirti en la tarea experimental ms utilizada en estudios de agresin con humanos y
especialmente es estudios farmacolgicos dedicados a ver los efectos de distintos
frmacos y tambin del alcohol en el comportamiento violento. Esta tarea es el anticipo
directo de una ms moderna y compleja, la llamada Point Substraction Aggression
Paradigm-PSAP y que describiremos brevemente.
La PSAP, que hemos traducido como el Paradigma de la Agresin a causa de la
substraccin de puntos es una tarea diseada para investigar la conducta agresiva
humana en condiciones de control de laboratorio. El sujeto experimental, al que
queremos evaluar su respuesta agresiva, se ubica en una tarea que comparte con otro
sujeto (virtual y cuyo comportamiento est controlado por el experimentador). El sujeto
experimental puede administrar un castigo por medio de presionar un botn preparado
al efecto. Este castigo o estmulo aversivo consiste en hacerle perder dinero (u otro

19

beneficio) que haba ganado en la actividad compartida. Esta respuesta es la que

utilizamos para evaluar la agresin. El PSAP se gestiona por medio de un programa de
ordenador que administra los estmulos y registra las respuestas y una consola de tres
botones en la que se ejecutan las respuestas. El procedimiento que se aplica consiste en
tres opciones de respuesta A, B y C. El sujeto puede escoger entre uno de los tres
botones que corresponden cada uno a un tipo de respuesta: Respuesta no agresiva,
Respuesta agresiva (la presentacin de un estmulo aversivo a otra persona, en este caso,
el estmulo aversivo es la prdida de dinero) y la Respuesta escapatoria. La causa de que
el sujeto experimental agreda a otro es porque en la tarea el sujeto experimental va
ganando dinero mediante sus respuestas pero el otro le hace perder parte de ese dinero
ganado (substraction points) y por eso le castiga (agrede). Las respuestas agresivas se
deben a la provocacin que representa que el aliado del experimentador le haga
perder dinero al sujeto experimental y por eso le castiga. Naturalmente es un buen
ejemplo de tarea de provocacin de una respuesta agresiva proactiva o impulsiva. Esta
tarea es suficientemente vlida a nivel de anlogo experimental, fiable y sensible para
evaluar la agresin y se ha convertido en una forma ampliamente aceptada para evaluar
la agresin en contextos de laboratorio.
La realidad acerca de las medidas de la agresin en el laboratorio es que se
circunscriben a estudios relacionados con las bases psicobiolgicas de la agresin y con
el contraste de la eficacia de los frmacos y otras drogas en relacin al control de la
conducta agresiva y no parecen tener mucha utilidad en el trabajo profesional diario
donde las tcnicas observacionales, las entrevistas y los auto-informes se han
consolidado como en la mayora de evaluaciones psicolgicas. En este caso la
evaluacin de la agresin no es ninguna excepcin, pero s que es cierto que se necesita
un avance para llegar al nivel de la medida de la ansiedad u otros constructos similares.
La evaluacin de la agresin y la violencia tiene diferencias relevantes cuando se realiza
sobre sujetos adultos o nios y adolescentes. De hecho entre estos ltimos es de enorme
inters esta evaluacin pero por lo general se realiza por medio de la observacin directa
en contextos ms o menos controlados. No se suelen administrar pruebas de lpiz y
papel por su poca sensibilidad por la agresin (y otros fenmenos psicolgicos) en
poblaciones infantiles y se reduce casi siempre a la observacin y registro del

20

comportamiento. Los clsicos experimentos de A. Bandura sobre las agresiones a una

mueca inflada de aire son un buen ejemplo. Naturalmente que adems de estas
medidas se dispone de un repertorio, similar al que hemos descrito de instrumentos
psicomtricos variados (de naturaleza clnica y no-clnica) que en vez de ser autoinformados son completados por los padres, educadores o profesionales. Entre ellos
destacan cuestionarios generales de salud mental infantil (YLS, MACI, etc) , escalas
de registro del desarrollo y la maduracin infantil y, naturalmente, tambin se pueden
administrar pruebas de laboratorio como la PSAP (que tiene una versin para nios, la
Pulkinnen Aggression Machine). Para un tratamiento especfico de este tema es
recomendable consulta el trabajo de Cyrulnik et al. (2003).

2.6.- Resumen y conclusiones

La evaluacin de la agresin, la agresividad y la violencia es una necesidad urgente
debido a la enorme demanda profesional de actuacin tanto a nivel clnico como
comunitario. Su estrecha relacin con aspectos psicolgicos emocionales y afectivos
como la ira, la hostilidad o la impulsividad ha facilitado el uso de procedimientos
propios de valoracin de stos constructos psicolgicos en vez de la medida directa de
la agresin y la violencia. Es preciso disponer de instrumentos y tcnicas diseadas para
evaluar la agresin y la agresividad de forma especfica.
Hemos descrito tres aproximaciones metodolgicas distintas para evaluar la agresin y
la agresividad. En primer lugar las tcnicas basadas en el auto-informe, despus las
tcnicas de registro de observacin de la conducta y las entrevistas y, por ltimo, las
tcnicas de registro de la agresin en contextos de laboratorio.
Los procedimientos que se basan en el auto-informe nos proveen una informacin sobre
la agresin, y otros fenmenos relacionados, rpida, fcil pero con niveles limitados de
validez y fiabilidad que dependen de los sesgos propios de los auto-informes y la
naturaleza de la conducta agresiva. De entre todas las medidas de este tipo, adecuadas
para poblaciones adultas, la mejor es el AQ (tanto en su versin completa y reducida)
porque esta contrastada su utilidad y especificidad (Gallardo et al, 2006).

21

Por el contrario si queremos evaluar la agresividad (y sus conceptos asociados) en tanto

que disposicin de personalidad lo ms adecuado, a nuestro entender, es escoger las
subescalas especficas de los cuestionarios mltiples de personalidad como el EPQ, el
NEO-PI-R o el 16Pf5 (y similares). Tambin podemos considerar escoger, si la
poblacin a estudiar as lo requiere, las subescalas del PAI o del SCL-90-R. Las
subescalas de agresividad del PAI son particularmente tiles y recomendables para la
evaluacin de las conductas, sntomas y otros factores relevantes asociados a la agresin
y la agresividad en el contexto psicopatolgico.
Si se trata de realizar un registro (o evaluar la agresin por medio de entrevistas) es
adecuado emplear la MOAS (EMAM en su versin espaola) especialmente en
contextos institucionales y si bien es tediosa y lenta, tiene un alto valor en cuanto que es
un registro objetivo de los sucesos violentos que adems de tener en cuenta la
frecuencia de los mismos, sta frecuencia es ponderada por su gravedad ofrecindonos
al final un ndice global de agresin o bien cuatro indicadores de agresin verbal, contra
los objetos, auto-dirigida y contra las personas, que son de enorme utilidad (Arbach y
Andres-Pueyo, 2007).
Por ltimo se describen los tres principales procedimientos de evaluacin de la conducta
agresiva en el laboratorio y especialmente el PSAP que en la actualidad representa una
buena opcin para la medida de la agresin en estudios experimentales.

2.7.- Referencias bibliogrficas.

Anderson,C. y Bushman,B. (2002). Human Aggression. Ann.Rev. of Psychology. 53.2751.
Andrs-Pueyo,A. (1997). Manual de Psicologa Diferencial. Madrid. McGraw Hill.
Andrs-Pueyo,A. y Jarque,L. (2005). IPV y prediccin de la violencia en delincuentes
crnicos por medio del PAI. Comunicacin presentada al 1er. Congreso Espaol
de Psicologa Jurdica. Santiago de Compostela. Junio 2005.
Andrs-Pueyo, A. y. Redondo, S. (2007). La prediccin de la violencia: entre la
peligrosidad y la valoracin del riesgo de violencia. Papeles del Psiclogo, 28(3),
157-173.

22

Andreu-Rodrguez J.M, Pea-Fernndez M.E, Graa-Gmez J.L. (2002) Adaptacin

psicomtrica de la versin espaola del Cuestionario de Agresin. Psicothema;
14(2):476-82.
Arango C, Calcedo A Jr, Gonzalez-Salvador T, Calcedo A. (1999) Violence in
inpatients with schizophrenia: a prospective study. Schizophr Bull; 25: 493-503.
Arbach,K. y Andres-Pueyo,A. (2007). Valoracin del riesgo de violencia en enfermos
mentales con el HCR-20. Papeles del psiclogo. 28 (3):174-186
Berkowitz, L. (1993). Psicologia de la Agresin. Bilbao. Desclee de Brouver.
Bobes,J. et al. (2006) Banco de instrumentos bsicos para la prctica de la psiquiatra
clnica . (2 edicin). Barcelona. Ars Mdica.
Bryant F.B., Smith B.D. (200)1Refining the architecture of aggression: a measurement
model for the Buss-Perry Aggression Questionnaire. J Res Pers; 35: 138-67.
Buss A.H. (1961).The Psychology of Aggression. New York: Wiley.
Buss A.H .y Durkee, A. (1957). An inventory for assessing different kinds of hostility. J
Consult Psychol; 21: 343-9.
Buss A.H. y Perry M. (1992) The Aggression Questionnaire. Jour. Pers Soc Psycol;
63:452-9.
Cherek D.R. (1992) Point-subtraction aggression paradigm (PSAP). Houston:
University of Texas.
Cherek D.R, Lane S.D, Pietras CJ. (2003) Laboratory measures: Point Subtraction
Aggression Paradigm (PSAP). En E. Coccaro (Ed.), Aggression: New York:
Marcel Dekker, Inc,: 215-28.
Coccaro, E. (ed) (2003). Aggression: Psychiatric Assessment and Treatment. New York.
Marcel Dekker
Cyrulnik et al. (2003). Measurement of Aggression in Children and Adolescents. En
Coccaro,E. (ed). Aggression. New York. Marcel Dekker.
Fernandez Seara,J.L. y otros (1995). Cuestionario de Personalidad Situacional. Madrid.
TEA. SA.
Gallardo-Pujol D, Kramp U, Garca-Forero C, et al. (2006) Assessing aggressiveness
quickly and efficiently: the Spanish adaptation of Aggression QuestionnaireRefined version. Eur Psychiatry; 21:487-94.
Garca-Len, A., Reyes G.A., Vila J. et al. (2002) The Aggression Questionnaire: a
validation study in student samples. Span J Psychol; 5(1): 45-53.
Geen,R. y Dorenstein, E.(eds) (1998). Human aggression: theories, research and
implications for social policy. New York. Academic Press.)

23

Krug, E. y otros. (2002). World Report on violence and health. Geneva: WHO.
Morey, L. C. (1991). The Personality Assessment Inventory professional manual.
Odessa, FL: Psychological Assessment Resources.
McCrae,R. y Costa,J. (1999). Inventario de personalidad NEO revisado (NEOPI-R) e
Inventario NEO reducido de cinco factores (NEO-FFI). Madrid: TEA.
Oquendo MA, Graver R, Baca-Garcia E, Morales M, Montalban V, Mann JJ.(2001).
Spanish adaptation of Buss-Durkee Hostility Inventory (BDHI). Eur J
Psychiatry; 15: 101-112.
Pham T.H. (1992) Psychometric assessment of the Buss and Perry Aggression
Questionnaire and its relationship to the PCL-R in a Belgian prison population.
Cahiers de recherch; 2004.
Silver J M, Yudofsky SC. (1991)The Overt Aggression Scale: overview and guiding
principles. J Neuropsychiatry Clin Neurosci. 3: S22-29.
Sjstrm, N. Eder D.N, Malm, U. et al. (2001) Violence and its prediction at a
psychiatric hospital. Eur Psychiatry; 16: 459-65.
Taylor S.P. (1967).Aggressive behavior and physiological arousal as a function of
provocation and the tendency to inhibit aggression. J Pers 35:297-310.
Tobea,A. (2003) Anatoma de la agresividad humana. Barcelona. Circulo de Lectores.
Vigil-Colet, A. y otros. (2005) Factor structure of the Buss-Perry aggression
questionnaire in different samples and languages. Aggressive Behavior, 31(6):
601-608.
Yufdosky et al. (1986). The overt aggression scale for objective rating of verbal and
physical aggression. Am.J.Psychiatry. 143:35-39.