Referencias y Comentarios de Terceros A Vicente Amezaga
Referencias y Comentarios de Terceros A Vicente Amezaga
Referencias y Comentarios de Terceros A Vicente Amezaga
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Referencias en Relacion
Capitulo 2.
Pares, Colonial Blockade; Vicente De Amezaga Aresti, Vicente Antonio de Icuza, comandante de
corsarios (Caracas: Comision nacional del Cuatricentenario de Caracas, 1966); Fernando Serrano
Mangas, "Contrabando en las costas y corrupcion ...
The Jews and the Expansion of Europe to the West, 1400-1800 - Pgina 366
Paolo Bernardini, Norman Fiering - 2004 - 567 pginas Citizens of Curasao to the West India Company, Chamber of Amsterdam, 1761 or 1762, ARA
NWIC 603, fols. 1446-47; Willem Kock, boatswain, to the WIC, Curacao, 13 July 1753, ARA NWIC
1161 fol. 6; Vicente de Amezaga Aresti, Vicente Antonio ...
Catlogo de la seccin Malagn de la Biblioteca Pblica del ...
Julia Mndez Aparicio, Ana Mara Toribio, Jos Echevarra - 1998 - 1008 pginas - Sin
La Comunidad juda de Coro, 1824-1900: una historia
Isidoro Aizenberg, Isidoro Aizenberg - 1983 - 244 pginas XU, N. 47 (Julio-Agos. 1931) p. 198. 5. Joseph Luis de Cisneros, DESCRIPCION EXACTA DE LA
PROVINCIA DE VENEZUELA (Caracas, 1950), p. 81. 6. Vicente de Amzaga Aresti, VICENTE
ANTONIO DE ICUZA COMANDANTE DE CORSARIOS (Caracas, 1966), p. ...
Magisterio y ejemplo de un vasco del siglo XVIII.
Mario Briceo Perozo, Mario Briceo Perozo - 1965 - 236 pginas Vicente de Amezaga Aresti, en su obra Hombres de la Compaa Guipuzcoana (Ediciones del
Banco Central, Talleres Artegrafa, Caracas, 1963) intitula el primer captulo con el nombre de
Pedro Jos de Olavarriaga, el Precursor, ...
La sangre de las naciones: identidades nacionales y violencia poltica
Antonio Robles Egea, Antonio Robles Egea - 2003 - 303 pginas As se constata, por ejemplo, en los escritos de Vicente de Amezaga Aresti, importante personaje
del PNV. Poeta y escritor fundador del Instituto Americano de Estudios Vascos en 1943, este
abogado exiliado haba detentado el cargo de ...
Letterature d'America: Nmeros 95-99;Nmeros 95-99
2003 Por ello para Amzaga el carcter de contrabandistas de los canarios es el origen de la rebelin, ...
obligados a practicar el 27 Vicente de Amzaga Aresti, Hombres de la Compaa Guipuzcoana
(Caracas: Banco Central de Venezuela, 1963). ...
Eusko-bibliographia: 1976-1980
Jon Bilbao, Jon Bilbao - 1985 - 1285 pginas - Sin
Montalbn: Nmero 13
Universidad Catlica Andrs Bello. Facultad de Humanidades y Educacin - 1983 A Vicente de Amezaga Aresti debemos una documentada biografa basada en la copiosa
1968 Magyar Tudomnyos Akadmia Konyvtra - Budapest Banco Central de Venezuela - Caracas
Vicente de Amzaga Aresti Manuel R. Egaa Allan-Randolph Brewer-Caras Toms Enrique Carrillo
Batalla... Banco Central de Costa Rica - San Jos ...
Boletn de la Academia Nacional de la Historia: Volumen 82,Nmero 326
Academia Nacional de la Historia (Venezuela). - 1999 Maracay 1982. Sociedad Econmica de Amigos del Pas. Memoria y Estudio. 1829-1839, dos
tomos. Banco Central de Venezuela, Caracas 1958. 3. BIBLIOGRAFIA AUXILIAR AMEZAGA ARESTI,
Vicente. Hombres de la Compaa Guipuzcoana, Caracas 1963. ...
La estadstica en la historia de Venezuela
Manuel Alfredo Rodrguez - 1974 - 342 pginas El venezolano Mario Briceo Perozo ha reconstruido su vida y ejecutorias y el vasco Vicente de
Amzaga Aresti le dedica otro estudio biogrfico. Se trata de uno de los espritus ms osados y
emprendedores que pisaron tierras de Amrica. ...
Revista de Economa Latinoamericana: Nmeros 28-31
1969 HOMBRES DE LA COMPAA GUIPUZCOANA, por Vicente de Amzaga Aresti. NOMENCLTOR CEOHISTORICO DE VENEZUELA (1498-1810), por Man o- Aurelio Vila. ACTAS DE LA SOCIEDAD DE
CIENCIAS FSICAS Y NATURALES DE CARACAS ,1867-1878, Blas Brun Celli ...
Memoria - Banco Central de Venezuela
Banco Central de Venezuela - 1967 Vicente de Amzaga Aresti, Hombres de la Compaa Guipuzcoana. Caracas, 1963. Marco Aurelio
Vila, Nomenclator geo-histrico de Venezuela (1498-1810). Caracas, 1964. Actas de la Sociedad
de Ciencias Fsicas y Naturales de Caracas ...
Revista nacional: literatura-arte-ciencia: Volumen 58
Uruguay. Ministerio de Instruccin Pblica y Previsin Social, Uruguay. Ministerio de Cultura 1953 Y muy pronto, cuando estamos a unas diecisiete millas de la ciudad eterna, nuestros ojos se
complacen en una villa notable por la belleza de (*) VICENTE DE AMEZAGA ARESTI es uno de los
genninos representante de la cultura hispnica que ...
Los Comuneros de Mrida: edicin conmemorativa del bicentenario ...: Volumen 152
1981 Hacia 1785 regres a Espaa y muri en Madrid el 31 de julio de ese mismo ao, en medio de la
mayor pobreza. (AGI. Santo Domingo. Leg. 913. Caracas. Legs. 478, 767, 768. Adems vase:
Vicente de Amzaga Aresti, Hombres de la Compaa ...
Historia de la traduccin: quince apuntes
Julio-Csar Santoyo - 1999 - 261 pginas -
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... en 1952 y 1954, Vicente de Amzaga Aresti sus versiones vascas de Hamlet y de la Balada de
la crcel de Reading; y que hoy en da uno de los traductores literarios ms prolficos quiz sea, y
sin quiz, Jaime Zulaika Goicoechea, ...
Libros del siglo XVI
Agustn Millares Carl - 1978 - 187 pginas ... 1821-1971 (Caracas, 1970), pp. 14-15. El inventario se conserva en el Archivo General de la
Nacin (Caracas), Real Hacienda, vol. 424, fols. 98t>-99r. Lo public tambin Vicente de Amzaga
Aresti, Hombres de la Compaa Guipuzcoana. ...
Los comuneros de Venezuela; una rebelin popular de pre-independencia
Carlos Emilio Muoz Ora - 1971 - 197 pginas Hacia 1785 regres a Espaa y muri en Madrid el 31 de julio de ese mismo ao, en medio de la
mayor pobreza. (AGI. Santo Domingo. Leg. 913. Caracas. Legs. 478, 767, 768. Adems vase:
Vicente de Amzaga Aresti, Hombres de la Compaa ...
Los comuneros de Venezuela; una rebelin popular de pre-independencia
Carlos Emilio Muoz Ora - 1971 - 197 pginas Hacia 1785 regres a Espaa y muri en Madrid el 31 de julio de ese mismo ao, en medio de la
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Vicente de Amzaga Aresti, Hombres de la Compaa ...
Boletn del Instituto Americano de Estudios Vascos: Nmeros 76-83
Instituto Americano de Estudios Vascos - 1969 VICENTE DE AMEZAGA ARESTI (1901-1969) En Caracas el 4 de febrero falleci este humanista
vasco, que naci el 4 de julio de 1901 en Algorta, Guecho. Hombre estudioso, supo alie nar el
trabajo y la preparacin de la carrera de Derecho, ...
Actas de la Sociedad de Ciencias Fsicas y Naturales de Caracas, ...
Sociedad de Ciencias Fsicas y Naturales de Caracas, Blas Bruni Celli - 1968 Traduccin de Leopoldo Landaeta. Prlogo de Alfonso Espinosa. Estudio bibliogrfico, por Pedro
Grases. Caracas, 1962. IX. Vicente de Amzaga Aresti. Hombres de la Compaa Guipuzcoana.
Prlogo, por Pedro Grases. Caracas, 1963. ...
Temas de historia de la educacin en Venezuela: desde finales del ...
Jess Andrs-Lasheras, Nacarid Rodrguez T., Fundacin Gran Mariscal de Ayacucho - 1997 - 229
pginas ... General" a Escritos del Libertador, Vicente de Amzaga Aresti, Hombres de la Compaa
Guipuzcoana, y Ramn de Basterra, Los Navios de la Ilustracin. Francisco Depons: Viaje a la
Parte Oriental de Tierra Firme, TI p. 85. ...
Historia de la propiedad territorial en los valles de Aragua, ...
Carlos Julio Tavera-Marcano - 1995 - 488 pginas Citado por Vicente de Amzaga Aresti: Hombres de la Compaa Guipuzcoana. Caracas, Banco
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Jos de Olavarriaga: Ob. Cit., pp. 257-258. 70. ...
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Vargas, 1966]. 372 p. (Ediciones del Cuatricentenario de Caracas). Vicente Antonio de Icuza,
comandante de Corsarios. ...
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Vascongadas y Amrica
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docente e investigadora en tierras americanas, lo mismo que Jess de Galndez. El bilbano Juan
de Larrea (que haba reunido en Cuzco en los aos ...
Bibliographic guide to business and economics: Volumen 1;Volumen 1
New York Public Library. Research Libraries, New York Public Library. Research Libraries - 1982 Sin
Curazao y la costa de Caracas: introduccin al estudio del ...
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Venezolana). || Charles D. Ameringer HAHR, 1965, XLV, ...
Libros y bibliotecas en Venezuela colonial, 1633-1767
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Plantas cultivadas y animales domsticos en Amrica Equinoccial: ...
Vctor Manuel Patio - 1967 5 p. adicion, de dibujos por Blancb AMEZAGA ARESTI, Vicente de: 1963 Hombres de la Compaa
Guipuzcoana. Prlogo por Pedro Grases. BANCO CENTRAL DE VENEZUELA. Coleccin his- tricceconmica venezolana. VoL IX. Caracas. ...
Espaa e Hispanoamrica: Suplemento: Volumen 9
Rijksuniversiteit te Utrecht. Bibliotheek, Rijksuniversiteit te Utrecht. Instituto de Estudios
Hispanicos, Portugueses e Iberoamericanos - 1949 65 AGS 3520; syst. cat. 729 III. Temas hispanoamericanos. a. Obras generales. 1. Periodo
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Colombia, Ecuador, and Venezuela: an annotated guide to reference ...
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Studia Rosenthaliana: Volumen 31
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Venezuela: the search for order, the dream of progress
John V. Lombardi - 1982 - 348 pginas In addition see also Vicente de Amzaga Aresti, El elemento vasco en el siglo XVIII venezolano
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Indice histrico espaol: bibliografa histrica de Espaa e ...: Volumen 11
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Aresti, Hombres de la Compaia Guipuzcoana (Caracas: ...
Puerto Rico's commerce, 1765-1865: from regional to worldwide ...: Volumen 85
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Berichte der diplomatischen Vertreter des Wiener Hofes aus Spanien ...
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Kopie une Konzept, f. 357 - f. ...
The Basque collection: a preliminary checklist
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a que nos hemos referido, investigar, conjuntamente con el Dr. Baales, la etimologa y
significado de esos mismos apellidos, ...
Historia de Maracay: Volumen 1
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Las reales compaas de comercio con Amrica: los rganos de gobierno
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El Golfo de Venezuela: una sntesis histrica
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Vicente de: 172, 540, ... 290, 296, 323, 471, 483, 484, 485, 522, 523 Amezaga Aresti, Vicente:
538 Ampies, Juan de: 58, 60, 68, 69, 210, 212, .
Marina. milicias y ejrcito en la Colonia
Santiago Gerardo Surez - 1971 - 117 pginas AMEZAGA ARESTI, Vicente de Hombres de la Compaa Guipuzcoana. Talleres Arte- grafa,
Caracas, 1963. Vicente Antonio de Icuza. Comandante de Corsarios. Italgrfica, CA Caracas,
1966. ARCE, Francisco Informe sobre el Estado de la ...
Tierra firme: Nmeros 23-28
1988 (20) El informe, sin fecha ni firma, pero a todas luces del citado comandante, est copiado en
Vicente Amzaga Aresti. Vicente Antonio de Icnza, comandante de corsarios, Edic.
Cuatricentenarias, Caracas, 1966, pp. 48-51. ...
Enciclopedia general ilustrada del Pas Vasco: A-Amuzti
1970 Fue general de los ejrcitos de Alemania, y recibi del emperador Leopoldo I el titulo de Barn de
Amzaga y guilas de la casa de Hungra para sus armas. CE AMEZAGA ARESTI, Vicente.
19
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Pedro Grases - 1967 - 143 pginas XXV-XXXIV. Fue publicado como N. 7 de la "Coleccin Clsicos Venezolanos de la Academia
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Caracas, 1963. Prlogo a la obra, incluida como N. IX ...
Boletn de filologa ...: Volumen 4,Nmeros 22-30
Montevideo (Uruguay) Instituto de estudios superiores. Seccin de filologa y fontica
experimental - 1943 VICENTE DE AMZAGA ARESTI Palabras pronunciadas por el Dr. Adolfo Berro Garca. Seoras,
seores: Tengo la honda satisfaccin de ofrecer la prestigiosa tribuna de nuestra Universidad, en
nombre de la Seccin Filologa del Instituto de ...
Seores del Caribe: indgenas, conquistadores y piratas en el mar ...
Luis Britto Garca - 2001 - 315 pginas AMEZAGA ARESTI, Vicente Luis: Vicente Antonio de Icuza, comandante de corsarios. Caracas:
Ediciones del Cua tricentenario de Caracas, 1967. ARUZ MONEANTE, Celestino Andrs: El
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Libros del siglo XVI
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Pedro Grases (Caracas, 1968), pp. 268-264 (Banco Central de Venezuela, Coleccin HistricoEconmica Venezolana, vol. IX). ...
El libro venezolano
Instituto Nacional de Cultura y Bellas Artes, Mara Josefina Tejera - 1969 - 145 pginas I. 732 AMEZAGA ARESTI, Vicente de El elemento vasco en el siglo XVIII venezolano. /Caracas,
Comisin Nacional del Cuatricentenario de la Fundacin de Caracas, 1966/ 372 p. 23 cm. Distri.
grat. 733. Hombres de la Compaa Guipuzcoana ...
Centro Euskaro de Montevideo, o, la dialctica del ser
Alberto Marcelo Irigoyen Artetxe - 2003 - 233 pginas Colabor con el peridico Euiko Deya de Buenos Aires (Argentina); e integr el Departamento de
Estudios Vascos que, a cargo de Vicente de Amezaga Aresti, se creo en la Universidad de
Montevideo. 109 Euskal Erria. n.9 913, 1/11/1945.
Boletn cultural y bibliogrfico: Volumen 11,Nmeros 1-6
Biblioteca Luis-Angel Arango - 1968 Magyar Tudomnyos Akadmia Konyvtra - Budapest Banco Central de Venezuela - Caracas
Vicente de Amzaga Aresti Manuel R. Egafia Allan-Randolph Brewer-Caras Toms Enrique Carrillo
Batalla . . . Banco Central de Costa Rica - San Jos
Actas del 33 Congreso Internacional de Historia de la Medicina:
Juan L. Carrillo, Guillermo Olage de Ros - 1994 - 1239 pginas Entre la copiosa literatura posterior generada merecen citarse los trabajos de Vicente Amzaga
21
Aresti. Amzaga se traslad a Venezuela con el exilio espaol que sigui al fin de la guerra civil en
1939 y su origen vasco le llev a ...
Actas del 33 Congreso Internacional de Historia de la Medicina:
Juan L. Carrillo, Guillermo Olage de Ros - 1994 - 1239 pginas Entre la copiosa literatura posterior generada merecen citarse los trabajos de Vicente Amzaga
Aresti. Amzaga se traslad a Venezuela con el exilio espaol que sigui al fin de la guerra civil en
1939 y su origen vasco le llev a ...
Documentos para la historia de la Iglesia colonial en Venezuela: Volumen 75
Gnesis y desarrollo de la ideologa bolivariana desde la ...
Jos Rodrguez Iturbe - 1973 - 490 pginas Vase: Estados Unidos Amrica (Latina: 6, 8, 9, 23, 247 Amrica en las letras espaolas del
Siglo de Oro, por V. De Pedro: 29 Amzaga Aresti, Vicente de: 51 Amiens: 90 El amor a la paz,
edicin de la Presidencia de la Repblica de ...
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University of Florida. Libraries. Catalog Dept - 1965 - Sin
Temas de historia colonial venezolana: Volumen 2
Mario Briceo Perozo - 1981 El Doctor Vicente de Amezaga Aresti, en su obra Hombres de la Compaa Guipuzcoana
(Ediciones del Banco Central. Talleres Artegrafa. Caracas, 1963), intitula el primer captulo con el
nombre de Pedro Jos de Olavarriaga, ei Precursor,
Tierra firme: Volumen 7
1989 (20) El informe, sin fecha ni firma, pero a todas luces del citado comandante, est copiado en
Vicente Amzaga Aresti. Vicente Antonio de Icuza, comandante de corsarios, Edic.
Cuatricentenarias, Caracas, 1966, pp. 48-51. ...
Amzaga Aresti, Vicente de. El elemento vasco en el siglo XVIII venezolano. [Caracas, Tip.
Vargas, 1966]. 372 pp. + 1 hoja. (Ediciones del Cuatricentenario de Caracas). Aunque centrado el
estudio del seor Amzaga en el siglo XVIII, ...
Boletn histrico: Nmeros 22-27
Fundacin John Boulton - 1970 ... en medio de la mayor pobreza. (AGI. Santo Domingo. Leg. 913, Caracas. Legs. 478, 767 y
22
768. Adems vase: Vicente de Amzaga Aresti, Hombrea de la Compaa Guipuzcoana, V. IX, pp.
294-350). 3. AGI. Caracas, Leg. 425, Doc. N
Ensayos y reflexiones: Volumen 2
Pedro Grases - 1989 (en: Obras completas de Vicente de Amzaga y Aresti, vol. III). Registra e identifica, con la
documentacin adecuada, 3.260 nombres de apellidos vascos, estudiados en los fondos de los
archivos de Venezuela, desde 1730 en adelante a ...
Historia fundamental de Venezuela
Jos Luis Salcedo-Bastardo - 1982 - 649 pginas AmZAGA ARESTI, VICENTE DE: El elemento vasco en el siglo XVlll venezolano. Ecc. Tip. Vargas
SA Ccs. Hombres de la Compaa Guipuzcoana. BCV. 1963. Anales Diplomticos de Venezuela. 4
TM Relaciones Exteriores. Ccs. 1951-61. ...
Revista de Indias: Volumen 27
Instituto Gonzalo Fernndez de Oviedo - 1967 AMEZAGA ARESTI, Vicente de: El elemento vasco en el siglo XVIII venezolano. Caracas, ediciones
del Cuatricentenario de Caracas, 1966, 372 pgs., en 4., rstica. Dentro del importante conjunto
de publicaciones que para conmemorar la ...
La aventura fundacional de los isleos: Panaquire y Jun Francisco ...
Lucas G. Castillo Lara - 1983 - 672 pginas Aunque no puede otorgrsele un valor absoluto a esos datos, como asienta Amezaga Aresti en su
defensa de la Guipuzcoana, ... Vlcente de Amezaga y Aresti. Vicente Antonio de leuza
Comandante de Corsarios. Caracas, 1966, p. ...
Los Comuneros de Mrida: edicin conmemorativa del bicentenario ...: Volumen 152
1981 ... Ambrosio de: 190 Alonso Ortiz, Jos: 527 Alfonso XIII: 13 Altuve, Marcos de: 44, 472, 476
Alvarado, Carlos: 48, 289, 446 Alvarez, Garzn Benito: 502 Alvarez de Catrelln, Pedro: 361
Amaya, Matas: 409 Amzaga Aresti, Vicente de: 499 ...
Cinq Siecles D'Imprimerie Genevoise - Pgina 28
... Vicente de Amezaga Aresti ...
Cinq Siecles D'Imprimerie Genevoise - Pgina 28
... Vicente de Amezaga Aresti ...
Revista de historia de Amrica: Nmeros 61-62
Silvio Arturo Zavala, Pan American Institute of Geography and History - 1966 Amzaga Aresti, V. de Vicente Antonio de Icuza comandante de corsarios. [Caracas,
23
Italgrica, CA, 1966]. 265 pp. (Ediciones del Cuatrcentenario de Caracas) . Sumario. Primera
parte: 1. Antecedentes. 2. Luchas contra holandeses e ...
Revista venezolana de ciencia poltica: Volumen 4,Nmeros 7-8
CEPSAL (Organization) - 1991 40 Idem 41 "Carta del Capitn Salvador Prez de Guzmn a Diego de Matos", en: Vicente
Amezaga Aresti, Hombres de la Compaa Guipuzcoana, (Caracas, 1963), p. 11. 42 ANH,
Documentos del Archivo de Indias, "Carta de Cabrera", VI p. 150. ...
Gran enciclopedia de Espaa y Amrica: Los vascos y America / ...: Volumen 13
Ignacio Arana Prez - 1990 - 403 pginas Uno de ellos fue el profesor doctor don Vicente de Amzaga Aresti (1901- 1969), lingista,
abogado, escritor, poeta, polglota y polgrafo, nacido en Algor ta, Vizcaya En su pas fue juez
municipal, director general de Enseanza
Biblioteca de la Academia Nacional de la Historia: Fuentes para la ...: Volumen 76
Academia Nacional de la Historia (Venezuela), Pedro Jos de Olavarriaga Urquieta, Mario Briceo
Perozo - 1965 - 416 pginas NOTAS CAPITULO VIII (1) El Doctor Vicente de Amezaga Aresti, en su obra Hombres de la
Compaa Guipuzcoana (Ediciones del Banco Central, Talleres Artegrafa, Caracas, 1963) intitula el
primer captulo con el nombre de Pedro Jos
Memoria de la Direccin de Relaciones con las Colectividades ...
Alexander Ugalde Zubiri - 2007 - 334 pginas El exilio vasco en Amrica de Mirentxu Amezaga de Clark. La autora presenta la biografa de su
padre Vicente Amezaga Aresti (1901-1969), abogado que, tras ocupar cargos en el primer
Gobierno Vasco (Director General de Primera Enseanza) ...
Demonios del mar: piratas y corsarios en Venezuela, 1528-1727
Luis Britto Garca - 1998 - 590 pginas AMEZAGA ARESTI, VICENTE LUIS: Vicente Antonio de Icuza, comandante de corsarios; Ediciones
del Cuatricentenario de Caracas. Caracas, 1987. ARAUZ MONFANTE, CELESTINO ANDRES: El
contrabando holands en el Caribe durante la primera mitad ...
Boletn de la Biblioteca General: Volumen 5,Nmero 9 -Volumen 7,Nmero 12
1966 Amzaga Aresti, Vicente de. Comandante de corsarios. [Caracas], Eds. del Cuatricentenario,
[1966]. XVI, 266 p. lam. 23,5 cm. (Comisin Nacional del Cuatricentenario. Comit de Obras
Culturales). Contiene adems varios apndices con ...
Historia de Maracay: Volumen 1
Oldman Botello - 1987 Concejo Municipal del Distrito Federal. Crnica de Caracas. D DAV1LA, Vicente. Encomiendas.
Caracas: Archivo General de la Nacin. (5 Vol.) : Hojas Militares: Caracas: Archivo General de la
Nacin (3 Vol). DE AMEZAGA ARESTI, Vicente! ...
24
25
Gayle Hudgens Watson - 1971 - 279 pginas Amzaga Aresti, Vicente de. El elemento vasco en el siglo XVIIi venezolano. (Ediciones del
cuatricentenario de Caracas) ... Amezaga Aresti, Vicente de. Hombres de la Compaa
Guipuzcoana. (Coleccin histrico econmica venezo- lana, 9). ...
fecha
Boletn del Archivo General de la Nacin: Volumen 55,Nmero 208 -Volumen 56,Nmero 211
Venezuela. Archivo General de la Nacin - 1965 Amezaga Aresti, Vicente de Vicente Antonio de Icuza, comandante de corsarios. / Caracas/
Ediciones del Cuatricentenario de Caracas /1966/ Antorcha. El rotativo de Oriente. El Tigre. Ao
XII. Nos. 2529-30. 2-3 febrero 1966. Antorcha. ...
Biblioteca de la Academia Nacional de la Historia: ...: Volumen 163
Academia Nacional de la Historia (Venezuela) - Sin
Revista de historia de Amrica: Nmero 60
Silvio Arturo Zavala, Pan American Institute of Geography and History - 1965 Amzaga, Aresti, Vicente de. El elemento vasco en el siglo XVIII venezolano. Caracas, Tip.
Vargas, 1966. 372 pp. (Ediciones del Cua tricentenario de Caracas). Vase ante'^ormentc p.
22529. Labougle, R. de. "La sentencia del rey en el ...
Anuario: Volumen 3
Universidad Central de Venezuela. Instituto de Antropologa e Historia - 1966 Amezaga Aresti, Vicente de, Vicente Antonio de Icuza, comandante de corsarios. Caracas.
Italgrfica, CA, Edic. del Cuatricentenario de Caracas, 1966, 265 p. Varias obras ha echado a
andar don Vicente de Amezaga, en tierra venezolana, ...
Indice Biogrfico de Espaa, Portugal e Iberoamrica: Indice ...
Victor Herrero Mediavilla - 2000 - 3586 pginas - Sin
Colombia, Ecuador, and Venezuela: an annotated guide to reference ...
Gayle Hudgens Watson - 1971 - 279 pginas Amzaga Aresti, Vicente de. El elemento vasco en el siglo XVIIi venezolano. (Ediciones del
cuatricentenario de Caracas) ... Amezaga Aresti, Vicente de. Hombres de la Compaa
Guipuzcoana. (Coleccin histrico econmica venezo- lana, 9). ...
Demonios del mar: piratas y corsarios en Venezuela, 1528-1727
Luis Britto Garca - 1998 - 590 pginas AMEZAGA ARESTI, VICENTE LUIS: Vicente Antonio de Icuza, comandante de corsarios;
Ediciones del Cuatricentenario de Caracas, Caracas, 1987. ARAUZ MONEANTE, CELESTINO
ANDRS: El contrabando holands en el Caribe durante la primera mitad ...
26
Ensayos y reflexiones ; 3
Pedro Grases - 1989 - 447 pginas (en: Obras completas de Vicente de Amzaga y Aresti, vol. III). Registra e identifica, con la
documentacin adecuada, 3.260 nombres de apellidos vascos, estudiados en los fondos de los
archivos de Venezuela, desde 1730 en adelante a
El Estado Yaracuy
Universidad Central de Venezuela, Abdn Ramrez - 1966 - 286 pginas (En Hombres de la Compaa Guipuzcoana, Caracas, 1963), de Vicente de Amzaga Aresti. Parra
Prez. Dr. Caracciolo. Historia de la Primera Repblica de Venezuela. Primera edicin. Caracas,
1939. Segunda edicin. Caracas, 1959. .
Historia de la propiedad territorial en los valles de Aragua, ...
Carlos Julio Tavera-Marcano - 1995 - 488 pginas Vicente de Amzaga Aresti: Ob. Cit., p. 367. 107. Oldman Botello: Historia de Maracay. Villa de
Cura, Editorial Miranda, 1987. T. 1, p. 85. 108. Archivo de la Oficina Subalterna de Registro del
Distrito Marino del Estado Aragua. ...
The Hispanic American historical review: Volumen 45
James Alexander Robertson - 1965 By Vicente de Amezaga Aresti. Prologue by Pedro Grases. Caracas, 1963. Banco Central de
Venezuela. Coleccion Historico-Economica Venezolana, Vol. IX. Tables. Appendices. Notes. Index.
Pp. xxvi, 395. Paper. Students of the colonial ...
Historia
Isabel Clemente - 1988 - 219 pginas 14; Luis Ospina Vsquez, Industria y proteccin en Colombia, 1810-1930 (Medelln: ESF, 1955), p.
38; Vicente de Amzaga Aresti, Vicente Antonio de Icuza, comandante de corsarios (Caracas:
Ediciones del Cuarto Centenario de Caracas, ...
Memoria del Cuarto Congreso Venezolano de Historia del 27 de ...: Volumen 2
Academia Nacional de la Historia (Venezuela) - 1983 Amzaga Aresti, Vicente de El elemento vasco en el siglo XVIII venezolano. /Caracas/: Ediciones
del Cuatricentenario de Caracas /1966/ 372 p. Amzaga Aresti, Vicente de Hombres de la
Compaa Guipuzcoana. Prlogo: Pedro Grases. ...
La sociedad de confraternidad vasca "Euskal Erria'" de Montevideo, ...
Xabier Irujo Ametzaga, Alberto Marcelo Irigoyen Artetxe - 2007 - 372 pginas AMEZAGA ARESTI, Vicente, El hombre vasco, Ekin, Buenos Aires, 1967. Nostalgia I, JA
Ascunce, Donostia, 1993.
Vicente Antonio de Icuza:
Vicente de Amzaga Aresti - 1966 - 265 pginas Vicente de Amezaga, El elemento vasco en el siglo XVIII venezolano. Caracas, 1966. Aquiles
27
Nazoa, Los Humoristas de Caracas. Caracas, 1966. Mercedes Alvarez, Don Simn Rodrguez tal
como fue. Caracas, 1966. Vicente de Amezaga, Vicente ...
El hombre vasco
Vicente de Amzaga Aresti - 1979 - 336 pginas EL HOMBRE Vicente de Amzaga naci en Algorta (Getxo) el ao 1901 . Se gradu de abogado en
la Universidad de Valladolid; comenz a escribir en la lengua tan bien que en los aos veinte
obtiene ya el premio de Euskal Esnalea con su ...
Temas de historia colonial venezolana
Mario Briceo Perozo - 1981 - 574 pginas ... Felipe: 467 A maya, Lucas: 288 Amezaga Aresti, Vicente de: 464, 481 Anca, Jos Vicente de:
166, 185, 206, 207, 246, ... Diego Felipe: 288 Arcaya, Pedro Manuel: 453 Arce, Juan Vicente de:
65 Archivo General de Indias: 120, 126, 342,
El elemento vasco en el siglo XVIII venezolano
Vicente de Amzaga Aresti - 1966 - 372 pginas - Sin
Los Jesuitas en Venezuela: Las misiones germen de la nacionalidad
Jos del Rey Fajardo - 2006 - 984 pginas Martn, 46, 107, 742 AMEZAGA ARESTI, Vicente de, 753 AMOLAR, Francisco, 76 AMPIES, Juan de,
732 ANDINO, Estanislao. 704 ANDRADE S., Francisco, 260 ANDRADE, Antonio de, 12 ANDRS,
Jaime, 272 ANDRS. Melquades, 503 NGULO I1GUEZ, Diego, ...
Hilachas de historia patria
Manuel Rafael Rivero - 1983 - 187 pginas De acuerdo con una informacin fragmentaria, recogida por Vicente de Amezaga Aresti en su muy
documentada obra "Vicente Antonio de Icuza, Comandante de Corsarios", durante el tiempo de
actividad de la compaa se hicieron 268 presas,
La aventura naval de la Compaa Guipuzcoana de Caracas
Gerardo Vivas Pineda - 1998 - 418 pginas AMZAGA ARESTI, Vicente de. El elemento vasco en el siglo XVIU venezolano. Ediciones del
Cuatricenienariode Caracas, Caracas, 1966. Revista El Farol, n. 204, Crele, Caracas, enerofebrero 1963, ao XXIV, p. 17. ...
Historia del resguardo martimo de Venezuela 1781-1804
Eulides Ortega Rincones - 2003 - 376 pginas AMEZAGA ARESTI, Vicente de: El elemento vasco en el siglo XVIII venezolano, Caracas, EC, 1966.
: Vicente Antonio de Icuza Comandante de corsarios. Caracas, Ediciones del Cuatricentenario de
Caracas, 1966. ARAUZ MONFANTE, Celestino A.: ...
Marina. milicias y ejrcito en la Colonia
1971 -
28
... conducirse conforme a las leyes y usos de la guerra y deben observar rigurosamente las
instrucciones contenidas en su autorizacin oficial", (8) Vicente de Amezaga Aresti, Vicente
Antonio de Icuza, Comandante de Corsarios, pp. ...
La Defensa maritima en la Capitania General de Venezuela: (1783-1813).
Jairo A. Bracho Palma - 2005 - 540 pginas El intendente de Caracas a Don Jos de Calvez, 28 de junio de 1784 141 Vicente Amezaga Aresti,
Vicente Antonio Icuza, comandante de Corsarios. Caracas, Italgrfica, 1963, p. 41 141 AGI.
Caracas, 785. Relacin de meritos de Andrs ...
Historia de Venezuela: Volumen 4
Guillermo Morn - 1971 Vicente de Amezaga Aresti, Hombres de la Compaa Guipuzcoana. Prlogo Pedro Grases.
Caracas, Banco Central de Venezuela, 1963. Vicente de Amezaga, El elemento vasco en el siglo
XVIII venezolano. Caracas, Ediciones del Cuatricentenario ...
Crnicas de amama
Polixene Trabudua de Mandaluniz, Fundacin Sabino Arana - 1997 - 332 pginas Fue el director de La Citadelle Vicente Amezaga Aresti, un abertzale de altura. Su vida entera en
el destierro fue un ejemplo de vida cristiana. Excelente escritor dej testimonio de sus vivencias y
conocimientos histricos en numerosos ...
Boletn del Instituto Americano de Estudios Vascos: Nmeros 76-83
Instituto Americano de Estudios Vascos - 1969 Un Humanista Vasco Contemporneo Por Manuel de Irujo El cuatro de marzo Vicente de Amezaga
y Aresti cruzaba los mojones de la misteriosa frontera de la eternidad, de ese ms all al que
solamente vuela el espritu, dejando el cuerpo ...
Recensiones: Volmenes 1-2
1966 Amzaga Aresti, Vicente de. El elemento vasco en el siglo XVIII venezolano. [Caracas, Tip.
Vargas, 1966]. 372 pp. + 1 hoja. (Ediciones del Cuatricentenario de Caracas). Aunque centrado el
estudio del seor Amzaga en el siglo XVIII, ...
Ensayos y reflexiones ; 3
Pedro Grases - 1989 - 447 pginas (en: Obras completas de Vicente de Amzaga y Aresti, vol. III). Registra e identifica, con la
documentacin adecuada, 3.260 nombres de apellidos vascos, estudiados en los fondos de los
archivos de Venezuela, desde 1730 en adelante a ...
Temas de historia colonial venezolana: Volumen 2
Mario Briceo Perozo - 1981 ... Vicente de Amezaga Aresti ...
Revista de la Sociedad Bolivariana de Venezuela: Volumen 28,Nmeros 94-97
29
Sociedad Bolivariana de Venezuela - 1968 AMEZAGA ARESTI, Vicente de: El elemento vasco en el siglo XVm venezolano. - Caracas,
Tipografa Vargas, 1966. 374 p., facsmiles. Como el autor lo indica en la Introduccin, desde los
primeros tiempos de la Colonia puede sealarse la ...
Geschichte in Wissenschaft und Unterricht: Volumen 23
Verband der Geschichtslehrer Deutschlands - 1972 Band der vom Banco Central de Venezuela herausgegebenen Reihe erschienen ist, mit einer
Einleitung versehen, in der er das Werk von Vicente de Amezaga Aresti wrdigt . Zu den
bekanntesten Missionaren des Jesuitenordens in Paraguay ...
Cinq Siecles D'Imprimerie Genevoise - Pgina 28
... Vicente de Amezaga Aresti ...
Cinq sicles d'imprimerie genevoise: actes du Colloque ...: Volumen 2
Jean-Daniel Candaux, Bernard Lescaze, Socit d'histoire et d'archologie de Genve - 1981 - 717
pginas ... Vicente de Amezaga Aresti ...
Temas de historia colonial venezolana: Volumen 2
Mario Briceo Perozo - 1981 ... Vicente de Amezaga Aresti ...
Los Comuneros de Mrida: edicin conmemorativa del bicentenario ...: Volumen 1
Academia Nacional de la Historia (Venezuela) - 1981 - 575 pginas BIBLIOGRAFIA Amzaga, Aresti, Vicente: Hombres de la Compaa Guipuzcoana. Banco Central
de Venezuela. Caracas, 1963. Arcila Fakas, Eduardo: Economa Coloniat de Venezuela. Fondo
Cultura Econmica. Mxico, 1946. ...
Revista geogrfica Venezolana: Volumen 29
Universidad de los Andes (Mrida, Venezuela). Instituto de Geografa y Conservacin de Recursos
Naturales - 1988 ... AMEZAGA ARESTI, Vicente ...
Memoria: Volumen 2
1983 Amzaga Aresti, Vicente de Hombres de la Compaa Guipuzcoana. Prlogo: Pedro Grases.
Caracas: Banco Central de Venezuela, 1963. xxvi, 395 p. (Col. ... Amzaga Aresti, Vicente de
Vicente Antonio de Icuza, comandante de corsarios. ...
Los Comuneros de Mrida: edicin conmemorativa del bicentenario ...: Volumen 1
30
Academia Nacional de la Historia (Venezuela) - 1981 - 575 pginas BIBLIOGRAFIA Amzaga, Aresti, Vicente: Hombres de la Compaa Guipuzcoana. Banco Central
de Venezuela. Caracas, 1963. Arcila Faras, Eduardo: Economa Colonial de Venezuela. Fondo
Cultura Econmica. Mxico, 1946. ...
Historia de Venezuela: Volumen 4
Guillermo Morn - 1971 Amezaga Aresti, Vicente de: 569. Amigo, Pedro: 521. Amores, Francisco de: 551. Ampes, Juan
de: 45, 46, 89, 452, 483, 560, 622. Ampes, Mara de: 47. Andrada, Padre Alonso de: 435.
Andrade, Antonio de: 218. Andrade, Don Francisco de: ...
Boletn histrico: Nmeros 7-12
Fundacin John Boulton - 1965 Vicente de Amezaga Aresti naci en Algorta, Vizcaya, Pas Vasco, en 1901. Curs la carrera de
Derecho y se recibi de Abogado en la Universidad de Valladolid (Espaa). Fue profesor de la de
Montevideo de 1948 a 1955. ...
Boletn histrico: Volumen 8,Nmero 22 -Volumen 9,Nmero 27
Fundacin John Boulton - 1970 ... en medio de la mayor pobreza. (AGI. Santo Domingo. Leg. 913, Caracas. Legs. 478, 767 y
768. Adems vase: Vicente de Amzaga Aresti, Hombrea de la Compaa Guipuzcoana, V. IX, pp.
294-350). 3. AGI. Caracas, Leg. 425, Doc. N 2.
Aspectos econmicos de la poca de Bolvar: Volumen 1
Martnez Gonzlez Martnez G. - 1988 .M Ofrece una idea cabal del auge que haba alcanzado la siembra del ail en los Valles de Aragua,
la lista de hacendados y agricultores que corre inserta en la obra de Vicente de Amezaga y Aresti
"Hombres de la Guipuzcoana", p. ...
Hispanoamrica: Volumen 3
Demetrio Ramos Prez, Academia Nacional de la Historia (Venezuela) - 1988 - 399 pginas Vicente Amezaga Aresti: Vicente Antonio de lema, Comandante de Corsarios. Caracas, 1966, pp.
16-17). Paralelamente con el mantenimiento de su comercio con la Provincia de Caracas y
posteriormente con la Maracaibo y Andaluca, ...
El problema de la soberana : su historia ante el siglo XXI
Claudio Alberto Briceo Monzn - 2007 - 226 pginas Amezaga Aresti, Vicente de: Vicente Antonio de Icuza, comandante de corsarios. Edic. del
Cuatricentenario de Caracas, Caracas, 1966. Briceo Iragorry, Mario: Tapices de historia patria.
Caracas, 1982. Cayuela Fernndez, Jos y Pozuelo ...
El derecho internacional martimo en el mar de Venezuela: (1700-1783)
Jairo A. Bracho Palma - 2005 - 199 pginas ... leguas de este al oeste, por el teniente de navio Don Vicente Icuza, 1769, en AGI. Caracas,
784. Citado tambin por Vicente de Amezaga Aresti, Vicente Antonio Icuza, Comandante de
31
32
33
34
Vargas, 1966]. 372 pp. + 1 hoja. (Ediciones del Cuatricentenario de Caracas). Aunque centrado el
estudio del seor Amzaga en el siglo XVIII, ...
Ensayos y reflexiones ; 3
Pedro Grases - 1989 - 447 pginas (en: Obras completas de Vicente de Amzaga y Aresti, vol. III). Registra e identifica, con la
documentacin adecuada, 3.260 nombres de apellidos vascos, estudiados en los fondos de los
archivos de Venezuela, desde 1730 en adelante a ...
Temas de historia colonial venezolana: Volumen 2
Mario Briceo Perozo - 1981 ... Vicente de Amezaga Aresti ...
Revista de la Sociedad Bolivariana de Venezuela: Volumen 28,Nmeros 94-97
Sociedad Bolivariana de Venezuela - 1968 AMEZAGA ARESTI, Vicente de: El elemento vasco en el siglo XVm venezolano. - Caracas,
Tipografa Vargas, 1966. 374 p., facsmiles. Como el autor lo indica en la Introduccin, desde los
primeros tiempos de la Colonia puede sealarse la ...
Geschichte in Wissenschaft und Unterricht: Volumen 23
Verband der Geschichtslehrer Deutschlands - 1972 Band der vom Banco Central de Venezuela herausgegebenen Reihe erschienen ist, mit einer
Einleitung versehen, in der er das Werk von Vicente de Amezaga Aresti wrdigt . Zu den
bekanntesten Missionaren des Jesuitenordens in Paraguay ...
Cinq Siecles D'Imprimerie Genevoise - Pgina 28
... Vicente de Amezaga Aresti ...
Cinq sicles d'imprimerie genevoise: actes du Colloque ...: Volumen 2
Jean-Daniel Candaux, Bernard Lescaze, Socit d'histoire et d'archologie de Genve - 1981 - 717
pginas ... Vicente de Amezaga Aresti ...
Temas de historia colonial venezolana: Volumen 2
Mario Briceo Perozo - 1981 ... Vicente de Amezaga Aresti ...
Los Comuneros de Mrida: edicin conmemorativa del bicentenario ...: Volumen 1
Academia Nacional de la Historia (Venezuela) - 1981 - 575 pginas BIBLIOGRAFIA Amzaga, Aresti, Vicente: Hombres de la Compaa Guipuzcoana. Banco Central
de Venezuela. Caracas, 1963. Arcila Fakas, Eduardo: Economa Coloniat de Venezuela. Fondo
Cultura Econmica. Mxico, 1946. ...
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Demetrio Ramos Prez, Academia Nacional de la Historia (Venezuela) - 1988 - 399 pginas Vicente Amezaga Aresti: Vicente Antonio de lema, Comandante de Corsarios. Caracas, 1966, pp.
16-17). Paralelamente con el mantenimiento de su comercio con la Provincia de Caracas y
posteriormente con la Maracaibo y Andaluca, ...
El problema de la soberana : su historia ante el siglo XXI
Claudio Alberto Briceo Monzn - 2007 - 226 pginas Amezaga Aresti, Vicente de: Vicente Antonio de Icuza, comandante de corsarios. Edic. del
Cuatricentenario de Caracas, Caracas, 1966. Briceo Iragorry, Mario: Tapices de historia patria.
Caracas, 1982. Cayuela Fernndez, Jos y Pozuelo ...
El derecho internacional martimo en el Fecha Publicacion de la Obra - Marzo de Venezuela:
(1700-1783)
Jairo A. Bracho Palma - 2005 - 199 pginas ... leguas de este al oeste, por el teniente de navio Don Vicente Icuza, 1769, en AGI. Caracas,
784. Citado tambin por Vicente de Amezaga Aresti, Vicente Antonio Icuza, Comandante de
Corsarios, Caracas, Italgrfica, 1966, pp. 49-51. ...
Boletn histrico: Volumen 7,Nmero 19 -Volumen 8,Nmero 24
Fundacin John Boulton - 1969 Vicente de Amzaga Aresti. Edicin del Banco Central de Venezuela, Caracas, 1963. La formacin
del Oriente venezolano. I. Creacin de las gobernaciones. Pablo Ojer, SJ, Caracas, 1966. La
fundacin de Valencia. Hno. Nectario Mara. ...
Revista geogrfica Venezolana: Volumen 29
Universidad de los Andes (Mrida, Venezuela). Instituto de Geografa y Conservacin de Recursos
Naturales - 1988 - ... AMEZAGA ARESTI, Vicente.
Universidad Central de Venezuela, Abdn Ramrez - 1966 - 286 pginas FUENTE DE INFORMACION Amzaga Aresti, Vicente de. Hombres de la Compaa Guipuzcoana.
Caracas, 1963. Arcila Faras, Eduardo. ... (En Hombres de la Compaa Gu't- puzcoana, Caracas,
1963), de Vicente de Amzaga Aresti. ...
Historia fundamental de Venezuela- Jos Luis Salcedo-Bastardo - 1970 - 779 pginas Bibliobascfila, Euzkadi, 1985, nQ 217 y 218.
Recordatorio, Deia, ll-VIII-1988.
Centenario de un humanista vasco, Gara, 4-VII-200.
AMEZAGA Mirentxu: ire aita, Donostia, 1991.
AMEZAGA Ramn: Mi vida, Galea, 1992, n9 163.
ARRIEN G.: La generacin del exilio, Bilbao, 1983, 140.
ASTIGARRAGAAndoni: Abertzales en la Argentina, Bilbao, 1986, 65-667
37
38
39
Capitulo 3.
40
GRASES, Pedro, "Estudios critico sobre la bibliografa de la Compaa Guipuzcoana de Caracas", Los
Vascos y Amrica, pp. 223-286, Fundacin Banco de Vizcaya, Bilbao, 1989,
Los comentarios positivos que hace Pedro Grases acerca de su obra y la dedicacin para su
elaboracin constituyen el soporte que permite valorar la certeza de los conocimientos de
Amzaga sobre el tema objeto de su libro Hombres de la Compaa Guipuzcoana. Dice Grases al
respecto:
De acuerdo con datos aportados por Pedro Grases en la presentacin de Hombres de la Compaa
Guipuzcoana, Amzaga, se gradu de abogado en Valladolid, en 1927; ocup cargos relacionados
con su profesin , en su pas, como la de ser juez municipal de Getxo, en 1931; tambin realiz
actividades vinculadas con la docencia, cuando el gobierno vasco lo nombr Director General de
Enseanza en 1936. Al ao siguiente tuvo que salir de Espaa, con motivo de la Guerra Civil que
asol a ese pas entre 1936 y 1939. Se dirigi a Francia, en donde vivi cuatro aos, hasta 1941.
Ignoramos si entr en contacto all con los historiadores, que precisamente en ese momento,
revolucionaban la teora y la metodologa de la ciencia histrica: los reunidos en torno a los
Annales. Posteriormente se residenci en Argentina, en donde, segn afirma el Diccionario de
Historia de Venezuela de la Fundacin Polar (1997), fund el Instituto de Estudios Vascos, y dict
conferencias sobre temas culturales y polticos. En 1945 se instal en Montevideo, Uruguay, en
donde residi por diez aos, en los cuales ejerci la ctedra universitaria de cultura vasca. En el
ao de 1955 se mud a Venezuela, pas en donde permanecera durante catorce aos, hasta su
muerte en Caracas, el cuatro de febrero de 1969.
Hasta 1955, las fuentes consultadas no nos informan de actividad alguna desplegada por Vicente
de Amzaga Aresti, que nos permita vincularlo de modo alguno con el quehacer histrico. Hasta
ese momento se haba destacado como traductor al vasco de numerosos autores, tales como
Cervantes, Shakespeare, Oscar Wilde, Alejandro Pope, William Wordsworth, Esquilo, Cicern,
Boccaccio, Dante Alighieri, Descartes, Plinio, Goethe, Omar Kayyam, Juan Ramn Jimnez, Po
Baroja, entre otros.
Fue a partir de su llegada a Venezuela cuando, segn las fuentes consultadas, Amzaga comenz
a trabajar en el oficio de historiador, quizs interesado por las actividades de los vascos en estas
tierras en el siglo XVIII, cosa que descubri seguramente durante el ejercicio de su primera
actividad en suelo venezolano, que fue la de catalogador en el Archivo General de la Nacin; y
tambin a travs de su relacin con la Fundacin Boulton, que le patrocin sus ms importantes
investigaciones vinculadas con la presencia vasca en Venezuela en el siglo XVIII. En esos primeros
aos present una cantidad de trabajos en publicaciones peridicas, y ya en la dcada de 1960,
sus obras ms importantes, como Hombres de la Compaa Guipuzcoana, en 1963, El Elemento
Vasco en el siglo XVIII Venezolano, 1966; y en el mismo ao, Vicente Antonio de Icuza, y El
Hombre Vasco, 1967.
Los comentarios positivos que hace Pedro Grases acerca de su obra y la dedicacin para su
elaboracin constituyen el soporte que permite valorar la certeza de los conocimientos de
Amzaga sobre el tema objeto de su libro Hombres de la Compaa Guipuzcoana. Dice Grases al
respecto:
La obra que hoy se edita es fruto de larga y laboriosa investigacin, llevada por el amoroso
encandilamiento de rehacer la huella histrica que algunos vascos del siglo XVIII dejaron en
Venezuela. Con simpata, tanto como con imparcialidad y espritu de justicia, va trenzando con
mano certera los testimonios que se conservan en los repositorios documentales de Caracas. El
sereno y equilibrado juicio del autor est presente en cada captulo de su estudio. (p. XXI del
41
prlogo).
La obra Hombres de la Compaa Guipuzcoana, de Vicente de Amzaga Aresti, publicada en 1963
por el Banco Central de Venezuela, es uno de los muchos trabajos de investigacin referidos a la
Corporacin, que durante cincuenta aos actu en la Provincia de Venezuela; sin embargo, tiene
ste una caracterstica que le agrega un inters especial para el estudioso venezolano: el hecho
de haber sido producto de la investigacin llevada a cabo por un historiador oriundo del pas
vasco, pero arraigado en Venezuela; que incluso, la realiz en archivos venezolanos, tal como lo
informa Pedro Grases en el Prlogo del libro, en donde cuenta que el autor tom la informacin
del Archivo General de la Nacin, ms los que luego ha ido sacando de las pesquisas
complementarias en el Registro Principal de Caracas, donde est conservado un gran repositorio
de documentos del pasado venezolano. Es decir, que estamos en presencia de un testimonio de
un autor que conoce por igual las realidades e idiosincrasias vasca y venezolana, por haber vivido
y trabajado en ambas, y que adems utiliza los repositorios venezolanos para destacar las
actividades de unos hombres y de una organizacin vasca.
Estilo del Discurso
Segn se desprende de los datos aportados por las fuentes consultadas, Amzaga Aresti despleg
una actividad relacionada con la literatura. La traduccin de varios clsicos as parecen
confirmarlo; en el Diccionario de Historia de Venezuela, de la Fundacin Polar se afirma que No
pudo aprender en su niez la lengua euskera, la cual estudi a partir de los 17 aos de edad hasta
alcanzar una maestra que le permiti escribirla en prosa y en verso y traducir obras de otros
idiomas. Y refirindose al libro Hombres de la Compaa Guipuzcoana, Pedro Grases resalta la
utilizacin de un lenguaje potico por parte de Amzaga:
Otro elemento a considerar para valorar el conocimiento que sobre la materia tratada, posee el
autor de Hombres de la Compaa Guipuzcoana, lo constituye la comparacin con otras obras
historiogrficas de autores reconocidos. Aunque el tema tratado por Amzaga es muy especfico,
pues se trata de la accin de ciertos personajes dentro del engranaje que represent la Real
Compaa Guipuzcoana de Caracas, y de la sociedad colonial en general, cuando ste acude al
indispensable cotejo con la realidad que le sirvi de marco, vale decir, cuando contextualiza su
tema especfico en la sociedad en general en la cual se desenvuelven sus personajes y
acontecimientos, resulta til la comparacin con el tratamiento que dan otros historiadores a los
eventos marco. En ese sentido, se puede verificar una certeza en el manejo de la informacin
histrica por parte de Amzaga, y ello se demuestra al revisar la bibliografa consultada para
realizarla. Pedro Grases da una lista: Hussey, Arcila Faras, Garca Chuecos, Demetrio Ramos,
Morales Padrn, E. B. Nez, Tavera Acosta, Lodares, Altolaguirre,, Rodolfo Garca,
La obra presenta 256 notas a pie de pgina, casi todas correspondientes a Archivos
Documentales, y muy pocas a referencias bibliograficas. Es importante sealar que para la
realizacin de esta obra, el autor consult casi exclusivamente repositorios venezolanos; el mismo
autor seala que El presente trabajo es, entre otros, fruto de nuestros aos de labor
investigadora en el Archivo General de la Nacin. La mayor parte de las fuentes documentales en
l citadas, como podr verse, proceden de all. Pedro Grases completa la informacin, cuando
dice que:
De todo ello se nutre este trabajo de Vicente de Amzaga, construido con los testimonios
suministrados principalmente por el Archivo General de la Nacin, ms los que luego ha ido
sacando de las pesquisas complementarias en el Registro Principal de Caracas, donde est
conservado un gran repositorio de documentos del pasado venezolano. (p. XII de la
presentacin).
42
Sin embargo, en la obra puede leerse que se ha utilizado otros repositorios, tales como el Archivo
General de Indias, el Archivo General de Simancas, las Actas del Cabildo de San Felipe y el
Archivo de Aragua.
el autor para la realizacin de su libro, ha recurrido a la documentacin primaria, existente en
diferentes archivos de la nacin, y en algunos documentos que se procur, y que provinieron del
Archivo de indias en Sevilla; es decir, que por la naturaleza del trabajo, referido a una poca
remota (siglo XVIII), ha tenido necesariamente que recurrir a esa documentacin
en su afn de valorar el contenido de los numerosos documentos que utiliza, establecer los hechos
a partir de la interpretacin de aquellos. Hace lo que Pea (2000) considera propio del historiador
positivista, el establecimiento de hechos mediante la filiacin del dato, actitud crtica ante las
fuentes que posibilita y ampla la indagacin del pasado. A lo largo de la obra se recurre a la
interpretacin de documentos. En un pasaje de la misma puede leerse un fragmento
El mal segua su curso: los tomos VI y VII de la coleccin DIVERSOS del Archivo General de la
Nacin, estn integrados por un voluminoso expediente que contiene los autos operados en virtud
de la comisin conferida al Capitn Don Mateo de Osorio, por el Capitn General de la Provincia
para poner reparo a los abusos de los ministros reales encargados de la extincin del comercio de
extranjera.
En el caso de Amzaga, se pudiera afirmar que es muy parecido al anterior, puesto que su obra es
el resultado de la labor de un literato, y la vez, de un cientfico social. El tono potico, que a ratos
agrega Amzaga a su obra, y del cual hace mencin Pedro Grases, se puede notar en el siguiente
fragmento de su Hombres: En su mayorazgo de Sarra, en Orio, en sus tierras de Usurbil, o
mejor que todo, en su Azpeitia natal, en aquel verdeante valle que en el Urola se espeja y en el
que la mole de Izarraitz pone una nota de majestuosa perennidad...
Por otra parte, el discurso de Amzaga, independientemente de las consideraciones anteriores,
presenta una coherencia que es el reflejo de una persona instruida, profesional universitario, con
experiencia, desde sus aos de mocedad, en la traduccin de obras maestras de la literatura
universal; adems por su actividad universitaria y docente en varios institutos, tanto de Espaa,
como de Amrica Latina. El discurso est escrito en un lenguaje sencillo, y se puede decir que
hasta didctico; cuando se refiere a uno de sus Hombres, Jos de Iturriaga, lo describe de forma
casi escolar: Iturriaga era natural de la villa de Azpeitia (Guipzcoa), donde haba nacido en el
mes de diciembre de 1699. Sent plaza de guarda-marina en 1718, y en 1733 fue nombrado
Teniente de Navo. Segn Ramos Prez, era caballero de Santiago, haba desempeado el cargo
de Alcalde en su villa nativa y, ms tarde, el de Diputado General de Guipzcoa. Con un lenguaje
semejante la obra se puede leer con facilidad y entusiasmo, pues el mismo estimula y atrae la
atencin del lector.
Lo que se nota, an con una lectura superficial de la obra de Vicente de Amzaga Aresti, es la
nocin de hecho histrico, el cual se puede apreciar a lo largo de toda su historia.
El desarrollo de la obra, es una adaptacin de la categora sociolgica de hecho social, aunque no
es mencionada con frecuencia en la obra estudiada, s se puede detectar que la misma subyace en
el tratamiento que se le da a los acontecimientos que se relatan. En un pasaje escribe el autor:
Cuando Iturriaga lleg a Cuman da 10 de abril-, era all Gobernador Don Mateo Gual, el
mismo que, como Castellano de La Guaira, haba luchado a su lado en la victoriosa defensa de la
plaza contra los ingleses, en 1743. (...) Y cuando nos toca examinar, como ahora lo hemos de
hacer, la enconada enemistad entre ambos, es natural que comencemos por recordar ese hecho.
(p. 109).
43
Cuando Amzaga , basndose en documentacin, cuenta, con la certeza que el haber establecido
una verdad, es decir el conocimiento de un hecho, lo siguiente: Era, como se ve, plena la
confianza en las capacidades y conducta de Berastegui, quien, ya con el pie en el estribo, en carta
fechada en El Tocuyo, en 19 de octubre, da cuenta a Abalos de las ltimas novedades y
disposiciones... se puede notar el uso de la categora de hecho histrico.
La utilizacin constante de la categora de hecho histrico en la obra de Amzaga es una
caracterstica que se refleja en ella
En la obra de Amzaga, aunque se cuida de no parecer tan radical en este sentido, la constante
apologa que hace a los vascos de Guipuzcoana a lo largo de todo el libro, hasta el punto de que
esos vascos son los protagonistas y hroes del relato, indican una inclinacin del autor hacia las
bondades que se derivaron de la accin de esa colonia europea, que en un momento determinado
se traslad en nmero significativo hacia la Provincia y Capitana General de Venezuela. Cada
captulo es una resea de las actividades de esos personajes, representantes de aquel capitalismo
mercantil del siglo XVIII. En el prlogo del libro, el propio Amzaga reconoce cierta inclinacin
afectiva hacia los guipuzcoanos, pero l lo atribuye a razones coterraneidad: No hace falta decir
que fcilmente se echar de ver nuestra cordial simpata por los hombres de la Guipuzcoana. Es
algo que nos brota de la sangre y que no tenemos por qu disimular. Y aunque est dispuesto a
reconocer los errores que pudieron cometer esos personajes, es de los que estn convencidos
tambin, eso s, de que en el balance general, el saldo es francamente favorable al esfuerzo de
Guipzcoa...
Durante la permanencia de Amzaga en Venezuela se desarroll la historia econmica y social,
con los aportes iniciales de autores como Miguel Acosta Saignes, Eduardo Arcila Faras, Federico
Brito Figueroa, Domingo Felipe Maza Zabala y Ramn Tovar, principalmente; pero tampoco se
percibe influencia alguna de ellos en la obra Vicente de Amzaga, a pesar de que en su libro cita
en varias oportunidades a Arcila Faras.
Por ltimo, sera importante sealar, que la obra objeto de este estudio, al decir de crticos
prestigiosos, como Pedro Grases, est elaborada con una calidad y profesionalismo que le otorgan
un lugar en la historiografa venezolana, que si bien no es muy conocida, s sera de valor para el
investigador que, como el que esto escribe pretenda abordar un estudio relacionado con la
Compaa Guipuzcoana, corporacin vasca que tantos cambios introdujo en varios lugares de la
Venezuela del siglo XVIII,
Uno de los capitulos mas interesantes del actuar de la Compaia Guipuzcoana de Caracas, fue que
en el pais Vasco, origen y sede de dicha Compaia, a todas luces con vocacion comercial, resulta
que fue creada La Real Sociedad Bascongada de Amigos del Pas en 1765, bajo el patrocinio de la
Real Compaa Guipuzcoana de Caracas, con el fin de promover el desarrollo, en este caso
fundamentalmente el cultural, as como difundir las nuevas ideas y conocimientos cientficos y
tcnicos de la Ilustracin.
Palacio de Insausti de Azcoitia sede principal de la Real Sociedad Bascongada de Amigos del Pas
Naci del grupo Caballeritos de Azcoitia o Triunvirato de Azcoitia, impulsado especialmente
por Xavier Mara de Munibe e Idiquez, conde de Peaflorida, junto a Jos Mara de Egua,
marqus de Narros, y Manuel Ignacio Altuna. Fue la primera sociedad de este tipo creada en
Espaa, extendindose desde su primera sede en Vergara por todo el pas.
Los socios dividieron sus actividades en cuatro secciones: agricultura; ciencias y artes tiles;
industria y comercio; y poltica y buenas letras.
44
Entre los miembros estaran los reformistas ms importantes de la poca, como Foronda,
Villahermosa, Olavide, Azara, Melndez Valds, Samaniego y notorios cientficos extranjeros.
Establecieron una importante biblioteca, en la que figuraban las obras ms importantes, y crearon
el Seminario de Vergara, donde se enseaban algunas materias clsicas junto a las nuevas como
lenguas vivas, geografa, ciencias experimentales, matemticas, tcnicas, etc.
Notas y aportes acerca de la Obra Hombres de la Compaia Guipuzcoana Xabier Iaki Amezaga
Iribarren
AMEZAGA Y ARESTI, Vicente. Hombres de la Compaa Guipuzcoana. Captulo II: El Director
principal: Jos de Iturriaga". Caracas: 1963 ( tomo I, 91).
AMZAGA ARESTI, VICENTE DE. Hombres de la Compaa Guipuzcoana. Caracas: Banco Central
de Venezuela, 1963; __. Vicente Antonio de Icuza, comandante de corsarios. Caracas: Ediciones
del Cuatricentenario de Caracas, 1966
45
Capitulo 4.
46
Conoc desde el primer momento en que fue iniciada, la obra de investigacin llevada a
cabo por Vicente ci Amzaga en los fondos manuscritos conservados en el Archivo General
de la Nacin en Caracas. Da a da iban amontonndose las notas y transcripciones tomadas
de los documentos, con las cuales se completaba el perfil impreciso de los principales
protagonistas de la Compaa Guipuzcoana de Caracas a lo largo del fecundo siglo XVIII.
La idea inicial fue la de hacer una obra de conjunto sobre todas las actividades de la
Compaa, pero no lo permite la base documental que se conserva en Caracas, puesto que
dara slo una visin unilateral o fragmentaria. Entonces, concentr su atencin al estudio de
las figuras ms eminentes, en las que, de hecho, se abarca la varia y rica actuacin de los
gui-puzcoanos en los mltiples aspectos a que se dedicaron durante la existencia de la
Compaa: Olavarriaga, Iturriaga, Amenabar, Tellera, Urrutia, Uranga, Aguinagalde,
Sansinenea, Berastegui, Orendain, Antonio de Arbide, Manuel de Arbide, son nombres que
cobran nueva vida en las pginas de este libro, al frente de los compromisos de
administracin y gobierno en Venezuela en los propsitos mercantiles de la institucin, o al
servicio de las ideas e iniciativas que traan con ellos para aplicarlas a suelo americano. Y as,
distribuida en siete captulos, desfila la accin vital de un puado de compatriotas del autor
mejor, coterrneos que hace un par de siglos trataron en tierra venezolana de ordenar la vida
del comercio contra los hbitos del contrabando; o la defensa del pas ante las amenazas y
asaltos de invasin de los ingleses; o en la sofocacin de rebeliones locales en protesta del
nuevo sistema; o en la mejora de los viejos cultivos, junto con la introduccin de nuevas
explotaciones, como la del ail, por ejemplo; o los estudios para el laboreo de productos
minerales; o la vida de los libros que como signo de cultura trajeron a estos climas los "nauos
de la ilustracin", como en frase feliz los bautiz el poeta Ramn de Basterra en su obra clsica
en el tema de la Guipuzcoana.
De todo ello se nutre este trabajo de Vicente de Amzaga, construido con los testimonios
suministrados principalmente por el Archivo General de la Nacin, ms los que luego ha ido
sacando de las pesquisas complementarias en el Registro Principal de Caracas, donde est
conservado un gran repositorio de documentos del pasado venezolano. Con estas fuentes
directas, ms la inteligente consulta de la bibliografa ya publicada (Hussey y .Arcila Faras,
Garca Chuecos, Demetrio Ramos, Morales Padrn, E. B. Nez f Tavera Acosta, Lodares,
Altolagui-rre, Rodolfo Garca, etc.), ha reunido en este volumen una esplndida coleccin de
interpretaciones biogrficas del mayor inters.
La mira principal que distingue y caracteriza el alma de investigador de temas de historia
que hay en Amzaga, acaso est en esta frase puesta al final de su anlisis del Arancel de
Maracaibo (Cap. IV. 8), cuando dice:
Como quiera que sea, recogemos cuidadosamente estos datos en la
esperanza de que, quizs, sirvan para complemento de otros ms amplios y
precisos.
Es real expresin de la voluntad de servicio hacia el escla-reci^ento de un asunto relaifo a
los anales venezolanos en el que ha empicado entusiasmo y devocin ejemplares.
El libro se abre con el estudio de Pedro Jos de Olava-rriaga (Cap. I) con el cuadro general
de la situacin a su llegada al pas y las vicisitudes personales sufridas en su actuacin: el
cambio de Gobernador, la prisin a que fue sometido Olavarriaga ) as como su empeo por la
creacin de la Compaa Guipuzcoana, de la que fue base indudable la Instruccin general y
particular del estado presente de Venezuela en los aos de 1720 y 1721, manuscrito
importantsimo, actualmente en curso de edicin en la serie colonial patrocinada por la
Academia Nacional de la Historia. Analiza Vicente de Am-zaga el contenido del informe de
Olavarriaga, sus ideas, su carcter, as como considera sus observaciones sobre el pas, la
relacin con la Corona espaola, la inmigracin, el comercio, el contrabando con Curazao y el
47
estado de las fortificaciones construidas en la actual Venezuela (Puerto Cabello, "el mejor
puerto"). Estudia, asimismo, los remedios propuestos por Olavarriaga para cambiar el dficit
en que viva la Provincia.
La Instruccin de Olavarriaga fue, sin duda, el fundamento para el conuenio celebrado con
la Monarqua espaola, del cual se deriv la creacin de la Compaa Guipuzcoana de Caracas.
Los trminos del compromiso son analizados por Am-zaga, quien trae a colacin las opiniones
de Arsides Rojas y de Andrs Bello acerca de los efectos producidos por el establecimiento de
tal organismo en Venezuela, de considerables consecuencias en el cuerpo social del pas.
Olavarriaga, Director de la Compaa, tuvo que enfrentarse a la primera manifestacin hostil
suscitada poco despus de su instalacin; la rebelin de Andresote.
Termina el captulo con el pleito en Espaa contra Olavarriaga, cuya personalidad, as
como el reconocimiento de su obra, enjuicia y dictamina nuestro autor.
El capitulo segundo, que es el mas extenso del libro de Amzaga, est dedicado a Jos de
turriaga, de quien seala carcter y antecedentes. Se refiere a la presencia de Iturriaga en
Venezuela, y su accin contra los ataques de nauos exranjeros, principalmente en el caso de
la accin de Knowles contra La Guaira y Puerto Cabello, en 1743. En oportunos apndices
inserta los documentos relativos a los dos combates. La vida de la Compaa Guipuzcoana se
vio alterada con la insurreccin de Juan Francisco de Len, que ocupa varias pginas de la
obra de Amzaga. El Manifiesto, publicado en 1749 por Iturriaga en defensa de la Compaa
es estudiado detenidamente para deducir lo que significa para la historia de la Guipuzcoana y
para comprobar el desarrollo, en pocos aos, de la Provincia de Venezuela.
El otro gran tema concerniente a Iturriaga, es l de la Expedicin de lmites en ejecucin
del tratado concertado entre Espaa y Portugal en 1750, as como el tratado de instrucciones
a los Comisarios de 1751. Es apasionante el relato de los sucesos de la Expedicin, sus
dificultades, las misiones confiadas a Vrrutia, Alvarado, Solano, y Madariaga, as como las
dificultades de todo orden que tuvieron que vencer, la oposicin del Gobernador de Cuman y
la rivalidad de Mateo Gual, que arranca de los das de la defensa de La Guaira contra Knowles
en 1743. Aunque la Expedicin termina propiamente en fracaso, no dejan de ser positivas las
exploraciones realizadas, las memorias e informaciones que de ellas se derivan, as como las
fundaciones que quedan establecidas a lo largo de las vas fluviales del Sur del pas.
Trata luego de los holandeses, del problema de los negros, de la actividad de los
portugueses y de la opinin de los jesutas, contra quienes se urdieron informes desfavorables
en los que se vio envuelto Iturriaga, lo que fue motivo de profundo disgusto, tanto como el
hecho de su desavenencia con Eugenio de Alvarado, juego de rencores y desdenes que bien
merecera la pluma de un novelista.
Iturriaga queda luego, en 1762, como Comandante General del Orinoco, al finalizar la
Expedicin y ah sigue con su quimrico empeo de colonizar y crear centros de vida
organizada en las mrgenes del Padre Orinoco. Vida llena de hermosos proyectos y de
infatigables esfuerzos contra toda incomprensin y cualquier obstculo. El postrer aliento de
Iturriaga incita una pgina de rememoracin lrica a nuestro autor;
Era ya hora de terminar con todo sto. Con todo sto que no era sino la continuacin
de aquel bregar contra el duro ingls en aguas de La Habana y en las "funciones" de 1,3
Guaira y Puerto Cabello; contra las intrigas en la Corte de los mantuanos de Caracas, y la
hostilidad sorda o abierta de los que del contrabando haban hecho su modo natural de
vivir a lo largo y a lo ancho de toda Venezuela.
S, tena que ser bueno descansar de una buena vez, y para ello, dnde mejor que en
su propia tierra? En su hora, l supo cumplir con aquella Ley de "los caballeros de la nacin
vizcana, que, por la mayor parte, se casaban en su patria". (Cervantes. La Seora
48
Cornelia). Para ello, hubo de interrumpir su carrera que continu en adelante con aquella
doa Ana Antonia de Atristain, la fiel compaera de su vida. Pues bien, ahora, al final de
ella, volvera all. En su mayorazgo de Sarria, en Orio, en sus tierras de Usurbil, o mejor
que todo, en su Azpeitia natal, en aquel verdeante valle que en el Urola se espeja y en el
que la mole del Izarraitz pone una nota de majestuosa perennidad, en aquel valle de su
infancia y mocedad, el mismo donde corriera las suyas Iigo de Loyola, el peregrino de las
rutas del cielo, sera bueno terminar en paz su trabajosa vida, arrullado por los recuerdos
de tanta lucha y tanto trajinar por tierras exticas. Apacibles paseos; graves
conversaciones con los Padres del Santuario; charlas sobre ste o aqul tema cientfico con
sus viejos amigos, aquellos Caballeritos de Azcoitia teidos de un amable
volterianismo...Todas estas Cosas y muchas otras ms, nos place imaginar que pasaran
por la cabeza de nuestro guipuzcoano cuando, despus de haber delegado todas sus
facultades de Comandante General del Orinoco en el que haca poco que haba entrado a
serlo de Guayana, don Manuel Centurin, emprendi viaje hacia Caracas.
El Factor Jos de Amenabar es el personaje que llena el nuevo captulo ( e l III) de la obra de
Amzaga, quien nos presenta los argumentos esgrimidos para oponerse al intento de
aumentar el precio del cacao, por razones de escasez, como pretendan los cultivadores. Los
rasgos biogrficos de Amenabar destacan su recia conducta y su integridad. Perteneca a la
estirpe de los fundadores de la primera sociedad de Amigos del Pas, en Guipzcoa, los
famosos "caballeritos de Azcoitia", acerca de lo cual se extiende Amzaga por estimarlo un
hecho trascendente en la existencia de la Compaa Guipuzcoana de Caracas. Relata el
establecimiento de la Real Sociedad Bascongada de Amigos del Pas, sos fines, sus iniciativas
y publicaciones, con espritu emparentado con el del siglo XVIII europeo, tiempo
revolucionario, afanoso de la aplicacin cientfico racional, sin que por ello perdiesen los
guipuzcoanos *e2 anclaje religioso, demasiado recio para ser roto por esas matdidas".
Amenabar, hombre de amplios horizontes, deja tras-i ideario en sus escritos y lo deduce
Amzaga de la de la biblioteca privada que posea en Caracas.
En este punto, la prosa de Amzaga logra un enlace certero con la memoria de quienes en
Caracas,, en la tradicin de la Sociedad de Amigos del Pas., llegaron a fundar salones como
"aqul de los hermanos Xavier y Luis de Ustriz, vastagos del mismo viejo tronco de los
caballeritos, que admiraban a Humboldt como artistas y como sabios, y se preparaban la otra
corona ms gloriosa que haba de ceir para siempre sus sienes, como hroes de una patria que
empezaba a alborear a la vida de la libertad".
El captulo IV est dedicado ntegramente a los libros que llegaron a Venezuela con la
Compaa., sea como mercanca trada en los navios de comercio, sea camo colecciones
particulares de algunos de los hombres principales de su administracin; el Factor Tellera, el
capitn Urrutia, o don Jos de iturriaga, o el administrador Torre, o el cabo a guerra Agui-nagalde.
49
Desde 1730, o sea desde los primeros viajes de los barcos de la Guipuzcoana se saba que en
sus panzudas bodegas venan libros a la Provincia de Venezuela; pero los datos eran imprecisos.
El hallazgo del inventario de 1749, elaborado con mofiuo de la rebelin de Juan Francisco de Len,
suministra una ineresansima relacin de uZos y autores que Amzaga analiza sagazmente para
sacar conclusiones acerca del fipo de obras que traan a Venezuela. Es muestra del sutil espritu
analtico del autor, como el que dedica al "arancel de Mara-caibo", con motivo de las nuevas
disposiciones y tarifas aplicadas a esta mercanca, en 1779, a causa de la guerra con Inglaterra.
Esta investigacin acerca de los libros venidos a Venezuela en el siglo XVIII aporta referencias
de mucho inters en un tema poco documentado en la historia del pas. En la explicacin de un
documento de certificacin de libros, dice Amzaga, dolido de que no fuese ms explcito; "Poca
cosa todo ello..."; pero hemos de replicarle que la reconstruccin de asuntos como el de las
lecturas en el siglo XVIII, habr de hacerse de "pocas cosas", para que sumadas nos den la
visin esclarecedora y completa.
Excelente la contribucin que representa el trabajo de Amzaga! Suscribimos su
esperanza de nuevos hallazgos.
50
meses de paciente labor de acoplamiento de notas tomadas en fuentes directas. Bien est su
publicacin en volumen por el Banco Central de Venezuela en su serie histrico-econmica.
Debe agradecerse a la Junta Superior de Archivos de la Repblica de Venezuela sue haya
autorizado su inclusin en las ediciones del Banco. (1)
Tiene concluido el autor oros dos trabajos que algn da esperamos vean la luz pblica;
su investigacin sobre Vicente Antonio de Icuza, organizador de la represin del contrabando;
y un acopio de cerca de 3.000 fichas de vascos venidos al pas durante el siglo XVIJ.
(1)
Hacia ms deseable la publicacin completa del trabajo, las porciones que conocamos
imprfesas en el Boletn de la Academia Nacional de la Historia, n. 162, y en la Revista de la
Sociedad Bolivarlana de Venezuela, n. 58
II
En el Prlogo que coloca al frente de su estudio, Vicente de Amzaga formula una
declaracin extremadamente significativa, por cuanto que lo vincula espiritualmente con la
humanidad de quienes dan contenido y tema a la obra y, adems, establece el justo criterio
con que ha procedido en su tarea;
No hace falta decir que fcilmente se echar de ver nuestra cordial
simpata por los hombres de la Guipuzcoana. Es algo que nos brota de la
sangre y que no tenemos por qu disimular. Pero creemos haber
procurado evitar siempre que un mal entendido patriotismo nuble
nuestra visin, hacindonos caer en la parcialidad. En todo momento,
hemos estado y estamos dispuestos a reconocer los errores y abusos de
la Compaa, que no fueron pocos ni pequeos, como nacidos, en su
mayor parte, de la misma ndole de la empresa; pero convencidos
tambin, eso s, de que, en el balance general, el saldo es francamente
favorable al esfuerzo de Guipzcoa, en la justa valoracin del cual, por
otra parte, siempre habr de tenerse en cuenta en la tierra de Bolvar
esto que una de las ms calificadas plumas contemporneas del pas
estampa, en uno de sus ltimos libros; "No vale menos que ninguna
Constitucin el proceso de acciones y reacciones que, durante medio
siglo, ejerce en nuestro medio la Guipuzcoana". (2)
En efecto, Vicente de Amzaga, nacido el 4 de julio de 1901 en .Algorta (Gecho),
Vizcaya, pertenece a la misma esirpe, racial y geogrficamente hablando, a la que estn
entroncados los protagonistas de todo lo que narra y analiza en este volumen.
(2)
Uslai Pietri, Del hacer y deshacer de Venezuela, Caracas, 1962, pgina 180.
51
vivi unos aos en Uruguay, antes de radicarse en Caracas. En Montevideo fue Profesor en la
Escuela de Estudios Superiores y Profesor de "Cultura Vasca" en la Universidad de
Montevideo. Es Acadmico Correspondiente de la Academia de la Lengua Vasca.
Poeta y escritor en lengua vasca, ha publicado sus propias creaciones, y, adems., ha
traducido al vascuence obras de otros idiomas; del ingls, Hamlet, de Shakespeare (Editorial
Ekin, Buenos Aires, 1952); del espaol, Platero y yo, de Juan Ramn Jimnez (Editorial
Florensa, Montevideo, 1953); del latn, La amistad, de Cicern ( e n la Revista Eusko Gogoa);
y del griego Prometeo encadenado, de Esquilo (en la misma Revista). Public estudios en la
Revista Nacional del Uruguay, y colabor en diversos peridicos de Montevideo, particularmente
en El Plata. En Venezuela, ha publicado, en colaboracin con el Dr. Edgar Pardo Stolk, la
biografa Jess Muoz Tbar (Editada por la Fundacin Eugenio Mendoza, Caracas, 1959).
Ha colaborado en la Revista de la Sociedad Bolivariana y en el Boletn de la Academia
Nacional de la Historia. Tiene en vas de publicacin un Curso de Cultura Vasca, en el cual
abarca en sesenta lecciones los ms diversos temas, desde la prehistoria hasta nuestros
das.
La obra que hoy se edita es fruto de larga y laboriosa investigacin, llevada por el amoroso
encandilamiento de rehacer la huella histrica que algunos vascos del siglo XVIII dejaron en
Venezuela. Con simpata, tanto como con imparcialidad y espritu de justicia, va trenzando con
mano certera los testimonios que se conservan en los repositorios documentales de Caracas. El
sereno y equilibrado juicio del autor est presente en cada captulo de su estudio. Por otra
parte, lo expresa en ms de una oportunidad: "Y aunque no pretendemos ver a nuestros
compatriotas, que eran hombres de carne y hueso como todos, limpios de toda culpa en el
captulo de excesos...", "Hemos estado y estamos dispuestos a reconocer los errores y abusos
de la Compaa, que no fueron pocos ni pequeos..."
No le lleva, pues, un simple propsito de glorificacin de sus paisanos, a escribir sobre sus
vidas y sus obras, sino el afn de dejar la verdad bien aclarada.
Y a ello va con el tesn y el esfuerzo tradicionalmente reconocidos a los hombres de raza
vasca. Con el placer de la investigacin en s misma, como se deja ver en la pgina en que
dilucida el asunto de los libros trados por la Compaa Guipuzcoana. Ha explicado ya el
contenido del inventario de 1749 (Cap. IV) y se duele de que sus pesquisas no lograran ms
resultados para ilustrar el tema. Es decir, para el ao de 1749 tena un documento de gran
valor y sumamente explcito;
Pero despus, en los treinta y tantos aos siguientes en que la
Compaa sigue desarrollando sus actividades en tierra venezolana, las
referencias a la importacin por la Guipuzcoana del primordial elemento de
cultura que el libro constituye, han escapado por completo a todas
nuestras afanosas investigaciones en el Archivo General de la Nacin, a
travs de la seccin de la citada Compaa, como de todas las dems en
que, repetidamente, y en casi todas ellas a fondo, hemos indagado. Ni
una factura, ni un recibo, ni el ms mnimo papel, en fin, que nos hablara
o -diera luz sobre punto de tanto inters para nosotros y para cualquiera
que siquiera de lejos, se haya interesado sobre los afanes de los "Navios
de la Ilustracin", como la intuicin de Ramn de Basterra dio en llamar a
los barcos de la Compaa.
Pero la casualidad que, del modo ms inesperado viene a veces, a premiar
los esfuerzos, al parecer, vanamente realizados, hizo que recientemente,
examinando, para bien distintos propsitos en el Registro Principal de esta
ciudad, en la Seccin "Escribanas" el tomo 1, correspondiente al ao 1705,
52
III
La circunstancia de esta introduccin a la obra de Vicente de Amzaga me ha hecho
conocer un libro delicioso, Corografa de la muy noble y muy leal Provincia de Guipzcoa,
escrita en 1754, por el P. Manuel de Larramendi, de la Compaa de Jess, libro que
permaneci indito iasta 1882, cuando fue publicado en Barcelona por el Padre Fidel Fita, con
reedicin posterior de 1897, en San Sebastin. Ambas ediciones, sumamente escasas, de esta
obra hicieron escribir al cronista Carmelo de Echegaray, que la "amena y gallarda Corografa
de Guipzcoa no era tan leda como debiera serlo".
El P. Larramendi, de quien habamos manejado su Diccionario trilinge castellano,
vascuence y latn, nos da en su Corografa gratsimos captulos sobre Guipzcoa y los guipuzcoanos, entre otros uno de mucho inters dedicado a "La Real Compaa de Caracas",
importante por la fecha de 1754 en que se compwso.
A mi juicio, la pgina que transcribo de Larramendi, pone la glosa final ms adecuada a lo
que pudiera decirse de la obra de Amzaga y de los hombres de la Compaa Guipitz-coana
que aparecen en este libro.
Dice Larramendi;
53
Sin duda alguna las historias de estos Hombres de la Compaa Guipuzcoana, escritas por
Vicente de Amzaga sern ledas con placer y provecho por quienes utilicen esta. edicin.
Julio de 1963.
PEDRO GRASES.
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Escritos y Comentarios a
Capitulo 5.
55
Pedro Grases
56
Pedro Grases
57
por
Vicente Amezaga en sus escritos
Indice en orden alfabtico, de todos los Autores y personajes, (700) citados por Amezaga, a lo
largo de su obra periodstica.
Este ndice puede servir para conformar una visin cabal de la completa formacin humanstica
de Amezaga y de su inters en lograr un catastro vasco en todas las actividades humanas.
Capitulo 6 -
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59
Amezaga, Juan,
Arteaga, capitn,
Areste y Reyna, Faustino, sacerdote,
Artiea, marinero,
Ascanio, Miguel,
Austrea, Jos Donato,
Ayesiaran, Francisco Xabier, sacerdote,
Azpurua,
Azpiroz,
Aitor. Hroe legendario vasco.
Aitzol Seudnimo. Vase Aztimuo.
Aizkibel.
Alarcn, Pedro Antonio (1833-1889). Escritor.
Albniz, Pedro. Recopilador musical. Msico.
Alberdi, Juan Bautista (1810-1884). Escritor. Poltico argentino.
Albizu Perurena, Enrique (1906- ). Pintor.
Aldasoro, Ramn Mara, (Tolosa ?- Buenos Aires 1952). Delegado Gobierno Vasco en
Argentina.
Alemay, Jos, (1866-1939). Autor.
Alfonso X de Castilla, E! Sabio, (1221-1284).
Algorfa. Cantante. Bajo.
Almandoz. Msico vasco.
Almanzor (941-1002). Guerrero.
Alvarado, Pedro. Gobernador de Guatemala. S. XIX.
Alvarez de Toledo y Pimentel, Fernando (1507-1582). Duque de Alba.
Alvarez F., Mercedes. Historiadora venezolana. S. XX.
Alzaga, Toribio. Dramaturgo.
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61
Ariel. Espritu del bien, de la libertad, de la justicia. Personaje del conocido libro de Enrique Rod.
Arin. Txstulari
Arismendi, Juan Bautista. General Independencia Venezuela.
Arismendi, Miguel. Amigo de Simn Bolvar.
Arsteguieta. Familia venezolana del siglo XVIII. Formaba parte de la oligarqua criolla y de los
llamados Grandes Cacaos o Mantuanos, El Presbtero Juan Flix es uno de ellos.
Aristteles (384-322 ac). Filsofo clsico.
Arizmendi, Miguel.
Ariztimuo, Jos. Seudnimo Aitzol. Muere fusilado. Escritor.
Arnoriaga Nagore, Vicente (Bingen) (Pamplona 1931- ). Pintor. Expuso en Caracas y actualmente
en Madrid y Pamplona. Monumento al Gudar que se levanta en el Centro Vasco de Caracas.
Arocena, Andoni. Pintor.
Arocena, Fausto. Autor.
Arrambide, Luisa. Herona venezolana del s. XIX. Fue por Boves, el realista, atada a un can,
desnuda, en plena plaza San Francisco y azotada. Su padre era hombre de la Compaa
Guipuzcoana de Caracas.
Arregui. Traductor de Heine al euskera.
Arres y Beitia, Felipe (1841-1906). Poeta euskeriko. .
Arriandiaga Gorocica, Manuel (1876-1947).
Arriga. Intelectual.
Arrue Valle, Ramiro (1892-1971
Arrue Ricardo (1889-19?). Pintores, ceramistas. Eran 4 hermanos artistas.
Arteche o Artetxe, Pedro. Vasco-Uruguay
Arteta y Errasti, Aurelio, (1879-1940). Pintor vasco de gran renombre.
Artietas - Hermanos.
Artigas, Jos Gervasio (1764-1850). Procer de la independencia del Uruguay. De ascendencia
navarra.
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autoritarismo de Marco Antonio le valen finalmente la muerte. Tiene obras de carcter filosficomoral, y cartas que permiten conocerle en su aspecto ms intimo. Estas cartas en compilaciones
como La Vejez, La amistad fueron traducidas al euskera por Amezaga.
Cisneros, Francisco Ximenez (1436-1517). Cardenal.
Cisneros, Jos Luis. Historiador.
Clemente VII (1478-1534). Papa.
Colby, Frank Moore. Escritor.
Coln, Cristbal (1451 -1506). Descubridor de Amrica. Almirante de la Mar Ocano.
Companys y Jover, Luis, (1882-1940). Presidente de Catalua. fusilado por Franco.
Compaa Guipuzcoana de Caracas. Creada en 1728, se liquida en 1785. Damos aqu la lista de
sus factores, corsarios y marinera citados por Amezaga en sus artculos sobre el tema, asi como
los hombres de la administracin colonial de la Provincia de Venezuelaen 1777 conformada ya
en Capitana General de Venezuela con su primer Capitn general, Luis de Unzaga y Amezaga, y
de as Juntas del Seoro de Guipzcoa.
Caas, Jos Francisco,
Casas, Manuel Mara, coronel,
Carrasco, Gobernador,
Castro, Juan Daniel, sacerdote,
Courten, Juan Amador, ingeniero militar,
Christian, Jos, comerciante holands,
D
Dehollain Arnoux, Alejandro, comerciante,
De Gaulte, Charles (1890-1970). Presidente de Francia. .
De La Croix, Per. Autor del famoso Diario de Bucaramanga, indispensable para el conocimiento
de Simn Bolvar y la campaa libertadora. S. XIX. .
De La Maza.
De Pons. Cronista de Venezuela. S. XVIII.
Degas, Hilaire Germain Edgar (1834-1917). Pintor.
Demstenes. (Atenas 384-Calanria 322AC). Orador de gran motivacin poltica y celo patritico.
Daz de Ibarrondo, Isaac. Pintor.
Daz Snchez. Escritor S. XX.
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Feijoo y Montenegro, Benito Jernimo, fray. Religioso benedictino. (1676-1764). Polgrafo. Su obra
Teatro crtico universal publicada en 1726, as como las Cartas eruditas y curiosas en 1760, expresan un
espritu abierto, conciliador entre las ideas de la Ilustracin y la Fe, con apertura hacia Europa. Afirman
que uno de sus grandes mritos es "haber sacudido la modorra" de sus contemporneos.
Felipe II de Espaa (1527-1598).
Felipe IV de Espaa y Portugal (1605-1665).
Fergusson, Robert (1750-1774). Poeta escocs.
Fernndez Alvarez, Joaqun. Vase Espartero.
Fernndez de Viana y Ugarte, Lorenzo (1866-1929). Pintor.
Fernando de Castilla.
Fernando II de Aragn (452-1516).
Fernando VII de Espaa (1784-1833.
Figueroa, Juan de. Capitn de Ingeniera. S. XVIII.
Filipo de Macedonia (360-336). Rey de Macedonia, padre de Alejandro El Magno.
Flores Kaperotxipi, Mauricio, (1901- ). Escritor vasco especializado en pintura y esttica vascas.
Francisco de Asis (1181-1226). Santo.
Francisco de Xabier (Xabier en Navarra 1506- Shang-ch' van 1552). Ver adems referencias a
Mara de Azpilicueta, su madre, y a la familia JATSU, padres y hermanos..
Franco, Francisco (1892-1975). Militar espaol y Jefe de estado.
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Kortabitarte.
Kresala. Seudnimo. Vase Aguirre, Domingo.
L
L'Ancre.
La Cosa, Juan de la (1450-1510). Marino vasco.
Labayru y Goicoechea, Estanislao Jaime (1845-1904). Cronista de Bizkaia.
Laborde, Alexander (1773-1842). Viajero. Escritor.
Laffite, Jean (1780-1821). Escritor.
Laglance, Juan. Viajero del S. XIX.
Laisney, Teresa.
Lamiak. Personaje mitolgico vasco.
Landaeta. Familia de Venezuela, concretamente de Caracas, S. XVIII y XIX. De origen vasco, muy
numerosa. Juan Jos de Landaeta compuso la letra del Himno Nacional de Venezuela. Otros
miembros de la familia son nombrados por Ameza-ga: Juan, Pedro, Pablo, Blas, Martn, Blas
Miguel, Jos Manuel, Antonio...
Lande, Louis. Escritor.
Lardizabal y Elorza, Martn,
Larrazabal, Felipe,
Larra, Mariano Jos (1809-1857). Escritor espaol.
Larralde. Poeta.
Larramendi. Pintor.
Larramendi, Manuel (1690-1760). Escritor. Fillogo. Sacerdote Jesuta. Importante figura de la
cultura vasca. Autor de un diccionario basco, latn, castellano. De una apologa del euskeray
tantas otras obras interesantes. .
Larraaga, Dmaso, Antonio. Procer de la Independencia del Uruguay. Propulsor de la Biblioteca
Nacional, de Peridicos, de la Cultura en general. .
Larrazabal, Wlfgang. Militar venezolano. S. XX.
Larregui. Autor vasco.
Lauaxeta. Seudnimo. Vase Urquiaga.
Laurencio. Santo.
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Lausen.
Lavalleja, Juan Antonio (1786-1853). Procer uruguayo.
Lavigerie, Charles (1825-1892).
Lecuona, Manuel. Escritor, investigador vasco.
Lecuona, Vicente (1872-1924). Escritor, historiador venezolano.
Lefevre, Andr. Fillogo,
Legazpi, Miguel (1508-1572). Navegante vasco.
Leibnitz, Gottfed Wilhelm (1646-1716). Filsofo, fillogo, euskerlogo.
Leizaola Snchez, Jess Mara (1896-1988). Presidente de Euskadi. Escritor.
Euskerlogo. Amezaga fue su secretario particular en Barcelona y Pars. .
Len, Juan Francisco, rebelde a la Compaa,
Liendo, Silvestre, habitante Caracas,
Llaguna y Larrea, Felipe,
Lpez, Nicols,
Luperena, Ignacio,
Luzuriaga, capitn,
M
Madera, Martn, administrativo,
Malpica, sacerdote,
Mallo, Matos, Pedro, vecino de Barquisimeto,
Matos Montas, funcionario,
Mijares de Solorzano, Javier Antonio,
Madina, T. Autor. Musiclogo vasco.
Maeztu. Autor.
Maeztuy Whitney, Gustavo (1887-1947). Pintor.
Magallanes, Fernando (1470-1521). Navegante portugus al servicio de la Corona Espaola,
intenta dar la vuelta al mundo. Muere en la travesa, y lo logra Elkano. .
Mahn, Carlos Augusto Federico (1802-1887). Fillogo. Euskerlogo alemn.
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Vasco, . .
Orozco, Alonso S.
Orta, Celio Segundo. Economista venezolano. S. XX.
Ortega y Gasset, Jos (1883-1955). Filsofo y escritor espaol.
Ortiz, Juan,
Osorio, Mateo, capitn,
Ostir, Konrad. Fillogo.
Otaegui, Claudio. Poeta vasco.
Otao, Celedonio. Pintor vasco.
Ovidio (Publio Ovidio Nasn) (43 ac-18 de). Escritor clsico.
Oviedo y Baos, Jos (1674-1738). Cronista de la ciudad de Caracas. Historiador.
Oyarzabal, Narciso. Compaa Guipuzcoana de Caracas.
P
Pablo de Tarso (5 dc-ca 67). Santo.
Palacio, Pedro. To materno de Simn Bolvar.
Palazuelos, sacerdote,
Papini, Giovanni (1881-1956). Escritor italiano.
Patino, Jos (1666-1736). Hombre de Estado.
Pedro. Apstol.
Pedro el Cruel de Castilla.
Peguy. Escritor francs.
Pelay Orozco, Miguel (1913-). Escritor vasco de finsima pluma. Su libro Pelotaris, publicado en el
pas, es reseado bibliogrficamente por Amezaga en Venezuela. Aunque Pelay Orozco estuvo en
Venezuela, no se conocieron Amezaga y l personalmente. .
Pereda, Antonio (1608-1865). Escritor.
Prez Caldos, Benito (1843-1920), novelista y dramaturgo espaol.
Prez Guzmn, Salvador, capitn,
Prez de Guzmn, Fernn (13 76-1460?). Sobrino del Canciller Ayala. Escritor, precursor del
gnero bibliogrfico castellano.
Prez Jimnez, Marcos (1914-). Militar y dictador de Venezuela.
Prez Vila, Manuel (Barcelona ? - Caracas 1991). Historiador especializado en temas bolivarianos
con una amplia bibliografa. Director de la Fundacin Boulton. Director de su Boletn Histrico.
Miembro de la Sociedad Bolivariana de Venezuela. .
Periachi, Juan Jacobo. Socilogo venezolano S. XX.
Pernaut, Manuel. Sacerdote jesuta. Escritor e historiador. Venezuela. S. XX.
Pern, Juan Domingo (1895-1974). Presidente de la Argentina. Militar. 282. Platn. (Atenas ca
427-347 ac). Filsofo griego. .
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Plinio El Joven (ca 61-113). Escritor latino. Educado por su to Plinio El Viejo. Nos ha llegado de
sus discursos e! "Panegrico de Trajano", y se conserva un "Epistolario". Amezaga trabaj su figura
en una maravillosa conferencia, publicada posteriormente en el Paraninfo de la Universidad de
Montevideo.
.
Platino, (ca 203-270). Filsofo.
Pomponio Mela (Tarifa -ca 44 de). Gegrafo hispanorromano. En su De Chorografia o Geografa
describe no tan solo el litoral mediterrneo sino las costas europeas atlnticas.
Ponte, Josefa,
Portales y Meneses, Diego, Gobernador,
Porter, Robert Ker. Diplomtico ingls S. XIX. Estuvo en Venezuela. Escritor.
Pouvreau, Sttvain. Traductor de la Imitacin de Cristo publicada en Pars, en euskera laburdino.
Prescott. Escritor norteamericano.
Primo de Rivera y Orbaneja (1870-1930). Militar y dictador espaol.
Quazacoalt. Hroe mitolgico azteca. Jardinero del Edn
Quatrefages.
Quijote. Personaje de Miguel de Cervantes.
Quintiano, Marco Fabio (Calahorra ca 35 - Roma 95 de). Retrico y pedagogo hispanorromano.
Concibe la educacin como un desarrollo armnico de la personalidad. Influyente en el
Renacimiento y en nuestros das. .
Quinto Curdo.
Ramn y Cajal, Santiago (1852-1934). Escritor y cientfico espaol.
Regoyos y Valds, Santos Daro (1857-1913). Pintor.
Regulez, Dardo. Poltico e intelectual uruguayo, muy amigo de Amezaga.
Rekalde. Almirante. 355, 507. Rentera. Sacerdote. Poeta vasco.
Reverend. Mdico. Atiende a Simn Bolvar en su muerte.
Rezla, Joseba. Poltico vasco. Vicepresidente del Gobierno vasco.
Ribary. Fillogo.
Riestra, Genaro. Poltico. Gobernador Civil de Bizkaia en el franquismo.
Rizal, Jos (1861-1896). Mdico, escritor, patriota filipino.
Rod, Jos Enrique (1871-1917). Escritor uruguayo, autor de Ariel.
Rodoredo, Flor. Poetisa.
Rodrguez, Miguel de Manuel. Escritor contrario a los Fueros Vascos.
Rodrguez Castelao, Alfonso Daniel (Rianjo, Galicia, 1886-Buenos Aires, 1950). Nacionalista
gallego. Intelectual. Escritor. Orador. Hombre de extraordinaria personalidad. Propulsor de
Galeuzka. Amigo personal de Amezaga quien, a travs de sus palabras y letras, aprendi a amar a
Galicia y su cultura.
Rodrguez del Toro, Bernardo. Pariente poltico Simn Bolvar. 380. Rojas, Arstides (1826-1894).
Historiador venezolano. .
Rosmithal Viajero checo S. XV.
Rousseau, Jean Jacques (1712-1778). Escritor, filsofo. Su doctrina y la de todos los ilustrados se
difunde en Amrica entre los que habran de hacer poco ms tarde la revolucin libertadora. 348,
382.
Rumazo Gonzlez, Alfonso. Bigrafo ecuatoriana S. XX.
Sabat Ercasty. Escritor uruguayo. S. XX.
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V
Valds, Juan de (1498-1541). Escritor. Fillogo. Autor Di'logo de la Lengua, Fillogo.
Valla, Lorenzo. Escritor.
Van Eys, Wilhem Jan (1825-1914). Fillogo holands. Euskerlogo.
Vaz Ferreira, Carlos (1872-1958). Escritor uruguayo.
Velasco, Luis. Virrey de la Nueva Espaa.
Verdaguer, Jacinto (1845-1902).
Vigila. Monje. Produjo un cdice de concilios.
Vila, Marco Aurelio. Gegrafo cataln-venezolano. S. XX.
Vilinch. Vase Bizkarrondo.
Villaun, Cristbal. Escritor.
Villar, Sancho. Alcalde de Caracas. S. XVI.
Villasante, Luis. Fillogo vasco. Autor de una historia de la literatura vasca. Miembro
de Euskaltzaindia. 149.
Villehelio, Mme. Escritora.
Vinson, Julien (1843-1926). Fillogo, bibliotecario francs. Euskerlogo. Es autor de Essay d'une
bibliographie de la langue basque (Pars, 1891-92), importante y cientfico registro de cuantas
publicaciones en euskera se dieron en este pas.
Virgilio (Publio Virgilio Marn) (70-19 ac). Escritor latino.
Vitoria, Francisco (Vitoria-Gasteiz 1486-1546). Creador de! Derecho Internacional. Profesor en
Salamanca. Consultor del Emperador Carlos. Su verdadero nombre podra ser Francisco de
Gamboa.
Amezaga le dedica un captulo en el El Hombre vasco.
Vizcarret, Juan. Pintor.
Z
Zugazagoitia.
Zuluaga y Zabaieta, Ignacio (1870-1943). Pintor.
Zumalakarregui, Toms (1788-1835). Poltico y militar guipuzcoano del S. XIX. Protagoniz la
Primera Guerra Carlista. Fue lder carismtico de los ejrcitos vascos, levantando la bandera del
Pretendiente Carlos (Hermano del Rey Fernando) y los Fueros Vascos. Hace la campaa militar,
exitosa, en territorio navarro en su mayor parte. Guerra de Guerrillas. Muere al infectrsele una
pierna donde se le incrusta una bala perdida en el intento de tomar Bilbao.
Zumarraga, Juan (1463?-1548). Introductor de la Imprenta en Mxico.
Zurbaran, Francisco (1598-1664). Pintor
86
Capitulo 7.
Mirentxu Ametzaga
Editorial Xamezaga
http://editorialxamezaga.blogspot.com
01-2011
87
RICHMOND, VIRGINIA
El barco Quanza tiene raices legales e historicas en America porque traia casi un centenar de
judios escapando de las garras de Hitler. Llegando a Nueva York no les fue permitido desembarcar
no por ser judios sino por no tener visas, entonces el barco regresaria a Europa llevando su carga
judia a quienes de seguro les esperaba la muerte.
Pero antes de atravesar el Atlantico tuvieron que hacer escala en Norfolk, Virginia, para
reabastecer el combustible (carbon). Y estando encallado el barco en este puerto la esposa del
presidente, Eleanor Rooselvelt, se entero e intervino con su esposo Franklin, para que les dejaron
desembarcar en dicho puerto, y asi el 19 de agosto de 1940 ochenta judios estaban a salvo. Ellos
mandaron rosas a los Roosevelt junto a una tarjeta que leia "Con eterna gratitud por vuestro
gesto humano de los refugiados del Quanza".
Esto sucedia 14 meses antes de aita y ama embarcar en el mismo navio. La biblioteca de la
facultad de abogacia de la Universidad de Richmond, de la ciudad del mismo nombre y capital de
Virginia, atesora toda la historia y cultura del estado de Virginia.
Para celebrar el aniversario de tal acontecimiento se llevo a cabo la conmemoracion y entre otras
cosas se queria exhibir la maqueta del mismo barco, el "Quanza".
la Universidad de Richmond fundada hace dos siglos es bastante grande, y senorial, rodeada de
jardines floridos y sus grandes edificios de diferentes facultades. Buscamos la facultad de
abogacia y su biblioteca. Alla divisamos el maginifico edificio.
Preguntamos en la recepcion y enseguida nos dirigieron al lugar de exhibicion del buque. Alli
encerrado en vitrina de cristal esta la maqueta del famoso "Quanza"
Fue emocionante ver la reproducion de la nave que saco a los aitas del aquel caliente continente
africano. Bob y yo comparbamos lla foto de la portada del libro "Nere Aita" tratando de ubicar en
que lugar del barco la foto de los aitas fue sacada. Y despues de minucioso estudio conseguimos
saber, bueno Bob, yo no tenia idea, el sugerio no solamente el lugar sino la hora en que fue
tomada la foto, de 3 o 4 de la tarde.
Le escribi preguntandole muchas cosas. Me escribio de vuelta que cuando le eligieron a el para
hacer trabajo no le fue facil porque solo podia basarse en fotos viejas, y en dibujos de barcos
mercantes de la epoca.
88
que sacaron a los aitas de la triste y sangrienta Europa para entregarlos a la joven y libre tierra
americana. La travesia desde Francia a la Argentina duro 15 meses.
El 1o. fue el barco frances ALSINA que les llevo desde Francia a Africa. Este fue hundido en un
bombardeo aereo el 13 de noviembre de 1942 cerca de las costas de Algeria.
El 2do. el barco portugues QUANZA que les llevo desde Africa a Cuba, fue ensamblado en los
astilleros alemanes en Hamburgo (1929) y vendido para convertirlo en hierro en Castellon de la
Plana, Espana el 12 de octubre de 1968.
El 3o. el barco argentino RIO DE LA PLATA viaje desde Cuba a Buenos Aires, fue
El barco RIO DE LA PLATA originalmente era italiano, grande y elegante con capacidad de mas de
400 pasajeros,pero en setiembre de 1939 se encontraba en territorio maritimo americano y por
aquellas fechas el mundo estaba inmerso en la Segunda Guerra Mundial, asi que las posibilidades
de llegar a Italia eran muy remotas. Ante tal situacion, se convino vender el buque a la marina
mercante argentina que, a partir de ese momento le cambio el nombre a "Rio de la Plata".
Pero en aquellos momentos toda compra de vehiculos despertaba sospechas por parte de algunos
paises y esta no fue la excepcion. Algunos llegaron a suponer que este buque surtia de
combustible a embarcaciones alemanas, asi que comenzaron a vigilar la nave.
Los aitas habian llegado en este barco a Buenos Aires en abril de 1942. Dieciocho meses despues
el "Rio de la Plata" llego a San Francisco, California, donde abordaron-entre pasajeros y
tripulacion-286 personas, tres de ellos presuntos jerarcas nazis que huian de la derrota de
Alemania.
Ya en alta mar, el capitan Julio Alonso Ball, avisado sobre la cercana presencia de buques de
guerra, decidio aumentar la velocidad para alejarse de ellos. Fue en vano y tambien los seguia un
submarino.
89
Sin mas escalas, el "Rio de la Plata" atraco en la bahia y puerto de Acapulco el 18 de agosto.
Tripulantes y pasajeros bajaron para visitar el famoso puerto.
Algunas horas despues de haber atracado, el capitan se percato de un incendio que se origino en
el cuarto de maquinas y que iba extendindose lenta pero inexorablemente. Con el fin de evitar
danos tanto a las instalaciones porturarias como a la poblacion, alejo la nave, auxiliados por un
remolcador. Debido al peligro que representaba llevar el barco mas lejos, este fue abandonado en
la mitad de la bahia.
Parece ser que el barco esta rodeado de algas y corales que dejan ver la oxidacion del que antes
fue orgullo tanto de la marina italiana como de la argentina. Alli esta a muchos metros de
profundidad el "Rio de la Plata".
Varias partes del navio se conservan bien. Se pueden ver con las linternas de los buceadores,
tinas, mesas, cubiertos, parte de vajillas y otros muebles que se pueden divisar a pesar de la
oscuridad que reina en el hogar de cientos de peces y plantas.
Si alguien nos pregunta donde esta el Rio de la Plata no contestemos "obviamente entre Argentina
y Uruguay", porque el "Rio de la Plata" esta en Acapulco...
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30/05/2006
Capitulo 8
91
La editorial Susa ha publicado Itsaso Aurrean, un libro que recoge lo mejor de la obra potica de
Bingen Ametzaga, en sus dos facetas de autor y traductor. El poemario, dividido en tres partes,
recoge los poemas originales de Ametzaga anteriores a la guerra civil (1919-1936) y posteriores
(1937-1968), as como sus traducciones. Exiliado en Amrica, Ametzaga fue un importante
referente de las comunidades vascas en Argentina, Uruguay y Venezuela, y desde la Dispora
contribuy notablemente a la cultura vasca, traduciendo al euskera la obra de Shakespeare, Oscar
Wilde, Juan Ramn Jimnez y Walt Whitman, entre otros.
El libro Itsaso Aurrean, editado por la editorial Susa con la colaboracin de Xabier Irujo (nieto del
escritor), rene buena parte de la produccin potica de Bingen Ametzaga (1901-1969). La obra
incluye tanto sus traducciones poticas, en las que Ametzaga verti al euskera a autores
universales como Shakespeare, Wordsworth, Chaucer, Turgenev, Racine o Lope de Vega, como los
poemas escritor por el propio autor. Estos ltimos estn divididos en dos etapas, antes y despus
de la guerra y el exilio.
'En estos poemas est el alma de mi padre', 'Se puede ver su parte afectiva, romntica, y tambin
la indignacin por la guerra y la aoranza de Euskal Herria'. Buena parte de los poemas y
traducciones del libro fueron publicados en revistas como Egan en vida del autor, y otros, inditos,
quedaron en posesin de la familia a la muerte de Ametzaga en Caracas, en el ao 1969.
El mar, entre dos mundos
Entre los poemas propios, cabe nombrar obras como Itsaso Aurrean, que da ttulo al libro. 'Ese
Delante del mar refleja el vivir entre dos mundos, con el corazn en una Euskal Herria cuyos
sueos se truncan', explica Arantzazu, nacida en Uruguay. 'Mi padre senta una nostalgia enorme,
con la guerra perdi su mundo, pero nos transmiti la fe en que podamos reconquistar ese
mundo con la cultura. Este libro significa para m compartir con todos esa parte de mi padre',
explica Ametzaga, tambin escritora, autora de varias novelas histricas ambientadas en Amrica
y entusiasta estudiante de euskera a sus 63 aos.
Junto a los poemas originales Itsaso Aurrean incluye tambin traducciones de grandes obras de la
poesa como 'La Balada de la Crcel de Reading', de Oscar Wilde, o extractos del 'Hamlet' de
Shakespeare. Ametzaga fue desde la Dispora uno de los grandes impulsores de la traduccin al
euskera, llegando a traducir del francs, latn, griego, ingls, castellano y alemn. 'Fue
autodidacta, tanto en los idiomas como en su carrera de abogado, explica su hija. 'El alemn fue
el ltimo idioma que aprendi, lo recuerdo en el tren, del trabajo a casa con un libro de dibujos y
palabras'.
Impulsor de la cultura vasca en la Dispora
Bingen Ametzaga fue un incansable impulsor de la cultura y la lengua vasca en la Dispora. En
1944 cre la revista Galeuzca y cre la Ctedra de Euskera en la Universidad de la Repblica de
Uruguay. En aquel pas tradujo 'Hamlet' (publicado en 1953 por Ekin), entre otras obras de
William Shakespeare. El mismo ao public 'Platero eta biok', traduccin del clsico de Juan
Ramn Jimnez. 'Recuerdo que Jimnez le felicit y eso que decan que era bastante suspicaz con
las traducciones de su obra', rememora Ametzaga. 'Pero Jimnez se inform y le dijeron que era
una gran traduccin al euskera. Mi padre estaba muy orgulloso'.
En 1954 public en la revista Euzko Gogoa 'La balada de la crcel de Reading', de Oscar Wilde. En
1955 la familia se traslad a Venezuela, y en Caracas se implic en la creacin de la ikastola
Euzkadi, en el Centro Vasco Euzko Etxea. Ametzaga particip notablemente en la vida de la euskal
etxea, como secretario cultural y profesor de euskera. En 1957 fue nombrado acadmico
correspondiente de Euskaltzaindia. Falleci en febrero de 1967 en Caracas.
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Capitulo 9.
93
Cuando Ama, tras la reciente muerte de Aita, me coment y me pidi ayuda para su Proyecto de
grabar en cintas de Audio (cassettes) su vivencia junto con Aita y nosotros, sus hijos, en ese
momento me di cuenta de su visin y alcance de querer transmitir para que perdurara, todo lo
que significo para ella su vida con Aita.
Para mi, Ama, fue La mujer que acompa a Vicente de Ametzaga Aresti, esta frase tan sencilla
encierra lo que yo como hijo, vi, entend, sent, y compart, lo que significo para Aita tenerla a ella
como su esposa, y para mi, como su hijo, lo que signific tenerla como madre.
Las dificultades que les toc compartir en la vida los unieron en una forma muy especial, muy
fuerte, complementandose ambos en todos los mbitos, con un pasado lleno de recuerdos y el
futuro de la ilusin del regreso a Euskadi.
Ama se propona y dedicaba a determinadas tareas y esa perseverancia es la que hizo posible, en
el caso de las obras inditas de Aita, ordenar y recopilar todo el material no publicado que tenia
Aita en su escritorio. Ella se dedic, dentro de su dolor reciente tras la casi repentina muerte de
Aita, a recopilar, ordenar y colocar de su puo y letra, las notas y fechas a los diversos y dispersos
artculos de prensa y dems materiales que Aita tenia para sus proyectos futuros de publicacin.
Ama, encerrndose sola en la Biblioteca, con todo el dolor que le representaba, por los recuerdos
de toda una vida junto al hombre al que supo acompaar, no hizo sino lo que ella consideraba que
tenia que hacer, por su amor, admiracin, y su total dedicacin, al hombre de su vida.
Tal tarea de recopilar y ordenar todas las obras de Aita, es lo que ha permitido una parte de las
publicaciones que se han hecho sobre Aita en libros, y recientemente el Sitio en Internet que lleva
el nombre de Vicente de Ametzaga Aresti, nico sitio de referencia total, con su biografa, y con
toda su Obra totalmente publicada, posibilitando de esta manera, un potencial alcance en la
difusin Internacional a travs de Internet, siendo hoy en da el sitio de referencia de la vida de
Aita que publica sus obras completas.
Yo, su hijo, no hubiera podido realizar la creacin en Internet del sitio que lleva el nombre de Aita,
sin este trabajo que ella en forma callada, annima y con total entrega lo hizo sin buscar nada a
cambio, ni reconocimientos ni figuracin, simplemente lo hizo.
En un bal azul metlico que compro en USA, coloc todo el material recopilado de la obra de Aita
y lo orden segn su criterio. Dicho bal esta en el stano de la casa N 10 de Alzuza, Navarra
Habiendo nacido Ama, en los aos incipientes del Siglo XX, adquiri una formacin tpica de las
mujeres vizcainas de esa poca, sin embargo, tenia una inteligencia natural, sentido comn y un
saber estar, poco comunes para mujeres de su generacin y, quizs por ello, supo acompaar a
Aita, y llevar el hogar en todos sus detalles.
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Tuvo que buscar y levantar siete casas y apartamentos en los cuatro pases en que le toco vivir.
Como deca ella Si yo ya tenia la casa puesta en Sopelana, preparada, para mi vida despus del
matrimonio.
Tuvo sus hijos en tres pases diferentes: sus dos hijas mayores, Mirentxu y Begoa en Francia;su
tercera hija, Arantzazu, en Argentina y sus dos hijos varones, Joseba Bingen y Xabier Iaki, en
Uruguay.
Tras or la narracin que ella hace en los 12 cassettes, nos cuenta a todos los que las escuchamos
sus momentos de alegra y de tristeza. Narra con total franqueza aquellos instantes que le
hicieron sentir orgullosa, las vivencias cotidianas, pero tambin las situaciones que la hicieron
sufrir, quebrndosele la voz cuando relata tales detalles.
Siendo Ama una persona muy entera y muy asentada, con una visin realista de la familia y que
solo habla de Aita y de nosotros sus hijos, dibuj muy claramente las situaciones y actuaciones
que describe.
El hecho de haber tomado la decisin de recopilar y ordenar todo el trabajo indito de Aita en
medio de su dolor por la reciente muerte de quien fue el hombre y esposo de toda la vida y, por
otro lado, el hecho de grabar los 12 cassettes y escribir en 9 cuadernos toda la vida de ella y de
nosotros como familia hasta la fecha de la muerte de Aita, nos dice quien era esa persona. Por ello
he titulado este homenaje La mujer que acompao a Vicente de Ametzaga Aresti.
Ama tom las riendas en lo que a llevar la familia se refiere, le toc por poco tiempo encontrar y
empezar con el apartamento de Pars, luego el de Buenos Aires, poco despus el primero de
Montevideo, que al resultar pequeo ante la llegada de Mirentxu, nos mudamos a uno precioso y
con una excelente ubicacin. Y en Caracas, la busqueda de otros tres apartamentos, hasta la
adquisicin en propiedad de ultimo, Residencias Country.
Mis recuerdos se centran mas en Francisco Araucho, por lo que significaba ya como familia, las
vivencias diarias, el levantarse todos para ir a los colegios, las salidas a la placita Varela, y los
paseos a la finca de Biraben. Esos aos fueron de consolidacin de todos nosotros como familia,
prueba de ello, lo duro y doloroso que fue para todos dejar Uruguay, cada quien lo tuvo que
asumir lo mejor que pudo.
Ama tuvo una vida social muy activa en esos aos, se senta feliz y muy a gusto y reconocida,
como nunca lo fue en ningn otro pas, No en balde me deca que a ella le hubiera gustado
estudiar la carrera de Diplomacia.
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Al abandonar Uruguay, sola, tuvo que enfrentar toda lo concerniente a la liquidacin en remate de
todo lo que haban atesorado en los aos de vida en ese Pas, que tanto les dio, y donde nacieron
sus dos hijos varones.
La estancia de Ama en Euskadi fue difcil para Aita debido a la imposibilidad de realizar el proyecto
de trabajo en los archivos de Iparralde, pero especialmente para Ama, por la decisin de Begoa
de permanecer en Euskadi.
Mirentxu disfruto un tiempo de la compaa de su hermana Begoa, mientras que Arantza, tras
una corta estada en Las Arenas, fue la primera que regreso A Venezuela. Bingen y yo vivimos dos
aos en San Sebastin y disfrutamos de una total libertad de accin que nos marc para toda la
vida. Yo como hijo, me sent sin ningn tipo de querencia o compaia, excepto las de Bingen y
Conchesi, quien me tom mucho cario.
Despus de la breve estancia en Euskadi, Ama empez una nueva etapa de su vida en Venezuela
junto con Aita, esta vez sin los hijos. De nuevo le toc a Ama reiniciar y empezar en Caracasla
bsqueda de apartamentos y la mudanza en tres ocasiones, a medida que los hijos bamos
llegando de Euskadi, hasta que finalmente, adquirimos el apartamento en Residencias Country,
querido hogar donde se celebraron las bodas de Mirentxu y Arantza y fue la ultima morada de
Aita. Todo esto se logr en tan solo 14 aos de estada en Venezuela, dada la capacidad de
administracin que posea Ama y con el aporte de los sueldos de Aita y todos los hermanos, pero
en especial de Arantza, quien aportaba la totalidad del sueldo.
Yo dira que fue la poca madura de nuestra familia, alegras por las bodas, graduacin de
estudios de los hijos, la consecucin de una casa propia por parte de Aita, que les dio a ambos
gran satisfaccin por la meta alcanzada, publicacin de la mayora de sus libros y, adems, un
nuevo capitulo en la vida intelectual de Aita con total dedicacin a la investigacin histrica,
alcanzando renombre es este campo en Venezuela. Finalmente, el drama por la ida de Aita.
En todas estas etapas, Ama fue rectora y ejecutora de decisiones y pasos que se tuvieron que dar.
Como yo lo viv, y as lo recuerdo, Ama se senta orgullosa de todos nosotros y nos prodigaba una
justa relacin de amor segn cada quien lo poda necesitar.
Aqu debo resaltar un hito en la vida de Ama que fue nada menos que la alegra del reencuentro
en Montevideo con su hija Mirentxu de nueve aos de edad, tras siete aos de dolorosa
separacin debido a las guerras. Ama, con mucho amor, la apoy y ayud a su adaptacin a
nuestra familia. Ambas pusieron mucho de su parte para superar esa etapa y considero que entre
madre e hija lograron algo muy especial.
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Durante el perodo de dos aos en el que a los hijos nos toc vivir en Euskadi, Amay Aita
ciertamente no nos acompaaron y, quizs por la carencia de ese cario maternal, Bingen y yo
nos unimos mucho como hermanos. Hicimos una vida de total libertad, saliendo de excursiones al
monte y en contacto con la naturaleza. Esto me marc para toda la vida y aun hoy en da lo sigo
haciendo.
Ama, en sus grabaciones, que son su diario de vida, habla de todos sus hijos y de lo orgullosa que
se sentia, de cmo cada uno de nosotros, le correspondimos en nuestro actuar, en la vida de
familia y en los pocos o muchas satisfacciones que le pudimos dar a nuestros Aitas, Mirentxu, con
su decisin a los 9 aos de edad, de vivir con los Aitas, Arantza con su acompaar y soporte a
ellos a veces en momentos difciles, Bingen graduandose de medico, cosa de la que Ama se sentia
orgullosa, Lo que siempre todos quisimos es que Begoa estuviera presente, colocando la silla
vacia en la mesa de las cena de las Navidades. Esa aoranza se cumplio en Diciembre del 2008,
todos los hermanos pudimos estar juntos en una mesa de navidad, con Aita y Ama presentes, en
nuestros recuerdos.
Por mi parte, en la etapa de la viudez de Ama, puedo decir que nos unimos mucho, y ella me
hablaba mucho de sus cosas, dentro de la sencillez y comodidad de una relacin distendida que
estuvo marcada por salidas, paseos y viajes, ya que nos acompaamos mucho en los aos
convivencia como nico hijo soltero en el apartamento del edificio Friuli en Caracas.
El saber estar de Ama, tal como yo lo digo, era una compaa, siempre estable con opiniones y
decisiones y consejos, nunca tuvimos ninguna ria, ni nada parecido.
Como hijo, es tan facil y tan dificil, hablar del Ama, que no sea claro, relatos de amor,
comprension de una madre hacia sus hijos, ya bastante trillado el tema, La vida del dia a dia, en
forma de sencillos hechos, es lo que pueden mejor reflejar la personalidad y el actuar de Ama.
Ama cosia vestidos a las hermanas cuando pequeas, y en la foto en que estamos todos en
Montevideo, en los dias de la despedida a Uruguay, Mirentxu y Arantza estan con vestidos
confeccionados por Ama.
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Desde las tareas, de coser, cocinar, tambien tapizaba los muebles, con martillo y tachuelas, que
cosa curiosa me pedia que le acompaase a ferreterias que a ella le gustaba.
Comparti con ella el gusto por salir de compras, e ir a casa de Americanos, Arantza por sobre
todo, acompaaba a Ama, y asi amueblo la actual casa de Alzuza.
En mi caso, hicimos bastantes compras para equipar el pequeo apartamento del Edificio Friuli,
apartamento de soltero que yo tenia, y que compartiamos en las temporadas que ella vivio en
Caracas en su etapa de viudez.
Ella sabia manejar las situaciones de dificultades,normales en toda familia, como malas notas de
colegio, y cosas parecidas, propias de todo joven en epoca de desarrollo, y de rebeldia, Lo
manejaba y resolvia todo para que Aita no se enterara, eso fueron todos los grandes problemas
que como hijos les dimos a ellos, simplemente porque nos dieron amor y confiaban en nosotros,
nosotros correpondiamos dentro de nuestro mundo de jovenes, con inquietudes propias de la
edad.
Ella escondia a Aita el hecho de que yo saliera a pasear en moto, cosa que me gustaba, y aun hoy
lo hago, yo guardaba la moto en un closet de lenceria que tenia el Apartamento en el piso 6, Aita
nunca se entero.
Ama en su forma de ser, tendia a guardarse las cosas que fueran desagradables para otros, por
esa forma de ser, no era concebible tener una ria o gritos o peleas con ella.
De las cosa sencillas y alegres por el buen sentido del humor, era lo que prevalecia en todos
nosotros, a Ama se le iluminaba el corazon y a todos nosotros, por esas manera sencilla, mas no
significa ser simple, de llevar la vida en famila, a pesar de dificultades economicas u ocasionales
situaciones dificiles
Ama llevaba la administracion de la casa, buscaba los apartamentos adecuados, las compras, las
ropas, los muebles, decoraba la casa, escogiendo los muebles, en fin, era la cabeza rectora y
ejecutora del dia a dia del hogar,
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Porque el narrar de las cosas mas sencillas, pude ser lo mas difcil, y a veces la pluma no me
acompaa.
Fueron aos, en que decidio vivir en las casas de los diferentes hijos, en Washington, Pamplona y
Caracas, etapa esta, de mayor acercamiento y convivencia con Mirentxu y Bob, y Arantza y Pello,
en sus casas como hijas casadas, obviamente en situaciones diferentes a cuando vivian en casa
como solteras, pudiendo ella ahora, disfrutar de sus nietos, y convivir con los matrimonios de sus
hijas.
En mi caso, en Caracas y en el tiempo que estuve en Pamplona, creo que nos acompaamos
mucho, saliamos de excursion, la lleve a Merida en un viaje que le encanto, asi como a haciendas
del tiempo de la Colonia, retiradas en las cercanias de Caracas, por caminos no muy aptos, tanto
asi que en uno de ellos le salio un chichon en la cabeza, por los saltos golpeandose con el techo
del Volskwagen, a ella le encantaba, y prueba de ello, que me acompaaba a cuanta salida yo
podia hacer. posteriormente con un Jeep aleman de la guerra, con techo de lona, y sin puertas,
que cuando llovia nos empapabamos, pero ella nunca protestaba.
Como compensacion, la llevaba a la Colonia Tovar a comer una merienda que le gustaba mucho,
con torta de almendra, en el Hotel Freiburg
En Pamplona, decidi llevarla a Francia por el camino de Los Pirineos, en un Seat 600 sin
calefaccion y con neumaticos normales, en pleno invierno, asi llegamos, y ella me enseo los
pueblos donde estuvo con Aita.
Al igual que con Aita, mi papel con Ama, era de ayudarle en la cocina, pinche, ir de compras al
mercado de Chacao ella y yo solos, yo llevando el carrito del mercado, pasar la pulidora, rayar las
papas, pintar los marcos de las puertas, enhebrar las agujas de coser. hacer la jarra de refresco
para la comida, y fregar los platos.
Quizas esa relacion al parecer simple, da una comodidad para verse y conocerse con mas
profundidad, no es casualidad que los dos Homenajes, que como unico sitio de referencia total de
la vida y Obra publicada de Aita, y ahora este primer y unico homenaje a Ama, lo ha hecho quien
fuera el pinche de ambos, su hijo menor.
Al pie de este homenaje, he publicado mi Poesia dedicada a ella, creo que es todo cuanto yo
puedo escribir acerca de ella.
Xabier Iaki Amezaga iribaren
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1947-1955
Capitulo 10.
Editoral Xamezaga
http://editorialxamezaga.blogspot.com
01-03-2011
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Aita decidio radicarse en Montevideo, en Septiembre de 1943, comisionado para organizar la Gran
Semana Vasca, punto de giro en su vida y en la de todos nosotros, comenzando asi una de las
etapas mas felices de nuestra familia, aun cuando yo muy joven para poder tener recuerdos, sin
embargo me atrevo a narrar de aquello que forme parte.
Varios acontecimientos felices e importantes ocurrieron en esos aos, la Publicacin del primer
libro de Aita, la traduccin al Euskera (Hamlet de W. Shakespeare), la Orgenizacion y posterior
satisfaccin para Aita de Organizar la exitosa Gran semana Vasca, la llegada por decisin propia
de su hija mayor Mirentxu, y el nacimiento de sus dos hijos varones, Joseba Bingen, y Xabier
Iaki, orgullo de todo padre por tener hijos varones.
La ciudad de Montevideo fue fundada el 30 de enero de 1726 por Bruno Mauricio de Zabala,
natural de Durango (Bizkaya). Uruguay es uno de los pases ms pequeos de Sudamrica. Es
tambin una de las ms jvenes repblicas del Nuevo Mundo, Montevideo dominaba sobre
Uruguay ya que la ciudad no era solamente la capital sino el centro poltico, financiero, comercial,
industrial, social, cultural, educacional y religioso del pas. Su puerto hizo a la ciudad, por l
pasaban ms de los tres cuartos de todas las exportaciones e importaciones de Uruguay, por l
tambin llegaron, italianos, vascos y espaoles y otros que formaron la mayora de su poblacin.
Uruguay se distingua por su alto nivel literario, el segundo ms alto de toda Amrica Latina. Era
una nacin literaria, y llena de vidos lectores de peridicos. Se publicaban diariamente 15.
Uruguay no tuvo una gran civilizacin pre-hispnica ni tuvo una larga y colorida vida colonial
como Mjico, Per o Brasil; solamente haba posedo los pintorescos gauchos, cuya educacin
estaba en la silla de montar y sus armas eran las boleadoras
El 2 de septiembre de 1943, aita, ama y su beb Arantzazu recien nacida, despus de una noche
en el barco llegaron al puerto de Montevideo, desde Buenos Aires, con unas pocas maletas, la
cuna y el cochecito de la nia. Cuando atracaron en el puerto, un grupo de compatriotas al que
ellos no conocan estaban para recibirles y llevarles al Hotel Globo, cerca del Puerto
La razon, Aita tenia la responsabilidad de Organizar la Gran Semana Vasca
Haba mucho que hacer, y apenas dos meses para preparar. La fecha era el 30 de octubre, y haba
sido elegida por coincidir con la de la Abolicin de los Fueros.
En Montevideo existan dos centros vascos. El Euskaro-Espaol, que se fund en 1911, no admita
a los "franceses" (vasco-continentales). Un ao ms tarde, el 30 de marzo de 1912, se fund el
"Euskal Erria", que admita a los vascos de los dos lados de los Pirineos. De este ltimo escribira
Jos Antonio Aguirre en 1941, "Euskal Erria es la sociedad ms prestigiosa de Montevideo y una
de las ms prestigiosas que nuestros compatriotas tienen en Amrica, sino la ms. Cuenta con
ms de 1.000 socios, local propio con frontn y una magnfica propiedad en las afueras de la
ciudad" (Malvin).
A solo un mes de la celebracin de la Semana Vasca, Ama y Aita se movieron del hotel a un
pequeo apartamento ubicado cerca del parque de los Aliados, en el cual se eriga el obelisco
conmemorando a los firmante de la Primera Constitucin del pas en 1830 diseado por Zorrilla de
San Martn como aita nos indicaba en sus paseos por el parque con nosotros.
Aita dio la primera charla sobre tema vasco que se. haba odo en esta ciudad en el Paraninfo de la
Universidad de Montevideo sobre 'El bardo vaco Kepa de Enbeita'. Naci en 1890. y aita termin
cantando los zortxikos del poeta, que tanto haba gustado en Buenos Aires y "que mereci una
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de la escuela, dominaba el arte de la caligrafa y haca todos los rtulos para los deberes de la
escuela de los nios. Les contaba leyendas que enriquecan sus conocimientos del pas,
El da 11 de mayo a las 9 de la maana naci otro hermoso pelotari de 5 kilos 100 gramos. Xabier
Iaki, El 10 de junio se celebr el bautizo siendo mis padrinos Marianita Bidegaray de Janssen y el
Padre Goiloetxea quienes me pusieron el nombre de Xabier Iaki.
Mi participacin en los hechos de la familia estaban limitados por mi corta edad, pero una vez que
ya fui nio, empeze ir al colegio, junto con Bingen, ir a la placita Varela con mis hermanos,
participaba y asi lo recuerdo, en el dia a dia de una famila, con sus rutinas, sus celebraciones, sus
paseos a la chacra, las comidas preparadas por Ama, que todos disfrutbamos.
Con la llegada inminente de Mirentxu los Aitas se mudaron a un apartamento ms grande. La
ubicacin de esta casa, y la renta era muy apropiados, pero an queran hacer planes para el
futuro, porque para ellos el futuro era el "regreso". Era parte del vivir da a da sin la seguridad de
un maana en tierra ajena.
El tio Ino escribi desde Las Arenas anunciando que un barco de la compaa Aznar, el Monte
Amboto, llegara a Montevideo hacia mediados de diciembre con el Capitn Gastiarena a cargo de
Mirentxu, su llegada, fue el 15 de enero de 1948. en casa todos estaban tan ansiosos como los
aitas, Aranlza con ya casi 5 aos estaba feliz con la llegada de su nuevo hermanito Xabier, y
entenda mejor este acontecimiento que la llegada de una hermana mayor que ella en un barco.
Los aitas con los ojos empaados en lgrimas por la emocin indescriptible del momento miraban
a su hija mayor y no lo podan creer, aquella nia rolliza de dos aos y medio que haban dejado,
se haba convertido en una chica alta y espigada de nueve aos. Mientras tanto ella, no tan
consciente debido a su corta edad de lo que aquel momento representaba para ella,
preguntaba "quienes son mis aitas"?
Antes de bajar la escalerilla del desembarco el capitn le llev a Mirentxu a su cabina en donde la
entregara oficialmente a sus padres. Aita muy efusivo no dejaba de darle besos mientras le
llamaba "nere maitea", ama con sus ojos empaados en lgrimas y con su corazn de madre
desbordado por la emocin susurraba "qu feliz nos haces, hija".
Llegaron a casa y all le esperaban a Mirentxu el beb Xabier, que desde su coche sonri a su
hermana mayor y esta le empez a querer all mismo, as como a la Tata. Hubo mucho jaleo esa
noche en casa, muchos amigos haban venido a conocer a la nia. Arantza y Bingen acompaaron
a su hermana al cuarto. Queran saber que tena en la maleta para ellos, y mostrndoles los pocos
juguetes que haba trado consigo comenz su nueva vida compartindolos con sus hermanos.
La dinmica de la casa haba cambiado. No fue nada fcil el ajuste, tanto para los aitas que tenan
ahora una hija de 9 aos que no haban visto crecer, como para la nia que haba sido criada
como hija nica y haba sido mimada por sus tos y abuelos,
Los aitas sufran de las penas del exilio sentimental y econmicamente, y eso les absorba, no
pudindole prestar toda la atencin que ella hasta ahora haba recibido, y que tanto o ms
necesitaba en estos momentos, el afecto materno haba de repartirse teniendo en cuenta que
haba tres hermanos an muy pequeos que atender.
Tanto los aitas como Mirentxu pasaron momentos, semanas y tal vez meses difciles para
acoplarse, pero al final triunfaron el coraje de Mirentxu y el amor de los padres.
El apartamento alquilado y del cual tengo mis mas gratos recuerdos estaba situado en la calle
Francisco Araucho 1532, aos mas tarde ya de mayor, regrese a Montevideo a visitar el edificio la
calle y el barrio, se me hizo un nudo en la garganta, Montevideo no ha cambiado como las
grandes ciudades, permanece apacible, sedienta de que la quieran tal cual es, con su misma linea
de autobs el N 21, con su mismo recorrido, el puerto, su mercado
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tiempo, y lo que antes haba sido un gozo para l, la asistencia a reuniones culturales o sociales,
ahora era un tormento. Ahora sufra de antemano cuando tena que ir a reuniones, cosa que le
dejaba un poco bajo de nimos.
Adems de la sociedad vasca los aitas acudan a la Academia de las Letras que el Ministerio de
Instruccin Pblica y Asistencia Social haba creado en el ao 1943 y que presida el Dr. Montero
Bustamen-te. Actos a los que acuda la crema de la intelectualidad uruguaya.
Aos ms tarde se cre una Comisin, de Investigaciones Literarias, bajo el control del mismo
ministerio, para examinar los manuscritos de los escritores uruguayos para ver cual debera ser
parte de los archivos nacionales. All se reunan autoridades de diferentes partidos polticos, as
como religiosos, el Reverendo P. Ducatilln que present una brillante conferencia, o Monseor
Barbieri que expona de manera culta y ordenada y con excelente oratoria sus profundos
conocimientos adornados con su dominio de la lengua.
Aita conoci muchos amigos en estas jornadas a las que luego invitara ms tarde a los actos
culturales de Euskal Erra, dando as a Euskal Erna un nuevo giro, el cual fue beneficioso para la
sociedad vasca de Montevideo, en su labor por mejorar el nombre y la imagen de Euskadi.
Los aitas llevaban a los hijos a institutos de cultura como al britnico o al americano, la biblioteca
Artigas-Washington en la que proyectaban documentales, o pelculas educativas, se presentaban
exposiciones, adems de contar con unos importantes fondos de libros y discos en su biblioteca.
Su refugio era la naturaleza, el campo y el mar y paseaba por las vastas praderas uruguayas o a
orillas del mar que Montevideo le ofreca en abundancia era su mejor medicina.
Aita tena 50 aos. Ahora no tena ya ni fuerzas para luchar, la guerra le haba usurpado todo. Su
consuelo era ama, su leal compaera, siempre cerca de l para darle nimo. Para sus hijos supo
ser un padre ejemplar, para su patria un patriota excepcional, luch, trabaj, y puso su salud en
peligro para dar la mejor educacin a sus hijos en los mejores colegios, y para ver su patria libre,
sin escatimar esfuerzos ni prdidas personales, y dndonos con ello un ejemplo sin igual.
Ahora que su mente estaba fija en buscar algo seguro, se present para las oposiciones de un
puesto para la UNESCO, (Organizacin Educativa Cientfica y Cultural de las Naciones Unidas),
La organizacin estaba involucrada en un programa mundial para mejorar las normas
educacionales en todos los estados miembros y un programa para promover intercambios
culturales. El sueldo era muy bueno y era el trabajo fijo que es lo que ms necesitaba en estos
momentos, seguridad para sostener a la familia, un tipo de empleo muy adecuado para l.
Se prepar muy bien para una serie de exmenes que duraron una semana. Fueron das de
mucha tensin ante la proximidad de las pruebas. El dominaba bien el ingls, y estaba confiado en
el buen resultado. Esper durante dos meses hasta que al cabo de este tiempo lleg la negativa.
Ms larde supo que la Embajada Espaola trabaj en la Comisin para que no se diera ese puesto
a "personas que no tenan representacin de ningn pas". Una vez ms se sinti un triste
desterrado, y as lo expresaba:
Sin poder conseguir el trabajo que l quera, sigui con sus trabajos eventuales. Empez a
preparar un anlisis del libro, de Juan de Valds, escritor espaol, y autor del notable dilogo de
las lenguas, un tratado de Retrica para el Boletn-Instituto Americano de Estudios Vascos de
Buenos Aires.los amigos Biraben ofrecieron su hacienda para que los 3 tomaran 15 das de
vacaciones con toda la familia. Esta hacienda estaba en San Jacinto, en el Departamento de
Canelones a hora y media de Montevideo, en plena campia, un lugar tranquilo para reposar,
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fuera de la civilizacin. La chacra, como se le llamaba, era una casita blanca y roja de tres
habitaciones, cocina, bao y un enorme comedor que haca de sala. Estaba rodeada de acres de
tierra y de rboles frutales, eucaliptus, palmeras, pinos y un viedo inmenso. Fueron das de paz
interrumpida solamente por los cantos de los pjaros.
Tenan caballos, vacas y bueyes viejos que arrastraban la carreta, hasta la carretera principal
Todos en casa participaban en la recogida de las frutas; deliciosas mandarinas y abundancia de
uvas moscatel, vegetales; lechuga y tomate y pimientos para la comida, y a las tardes, sentados
debajo de un viejo omb,
Aita ya estaba dando sus ltimos toques al "Hamlet" de William Shakespeare que tradujo del
ingls al vasco y que sera publicado en la Editorial Ekin el 25 de noviembre de 1952, un poco
antes de la coronacin de la reina de Inglaterra. Mand un ejemplar especialmente encuadernado
como regalo de Coronacin a la Reina Isabel de Inglaterra que fue el 2 de junio de 1953. "Con
ocasin de la coronacin de la Reina Isabel II, la entidad 'Euskalizaleak' (los amantes del idioma
vasco) de nuestra capital ofreci a la soberana inglesa un ejemplar, especialmente encuadernado
de la traduccin al vasco del Hamlet, de Shakespeare hecha recientemente por el doctor Vicente
de Amezaga.
Aita recibi poco despus una carta de agradecimiento en nombre de la Reina Isabel II por el
obsequio a su Coronacin en que se le informaba estaba depositado en la Biblioteca
Conmemorativa de Shakespeare (Memorial Library en Stratford-on Avon), en calidad de
prstamos de Su Majestad. Fue un pequeo triunfo para aita que tanto trabaj para terminarlo a
tiempo de la Coronacin.
A todos nosotros les lleg a ensear l Txeru: Ume Eder Bat, Alzo, Alzo, Oir Or Goiko, Maritxu
Nora Zoaz, Ume Eder Bat, Ator, Ator Mutil Etxera, Aldapeko, Ama Begira Zazu, que a coro en
algunos actos los cuatro cantaron en Euskal-Erria Lo mejor eran los ensayos en el comedor de
diario despus de la cena.
Cerca de casa estaba la Facultad de Arquitectura de la universidad de Montevideo, y muchas
veces llevaba a su hija mayor, Mirentxu, a ver las obras de teatro cuando se representaban obras
de los grandes clsicos como la "Ufada" de Hornero y all en los jardines de la facultad.
Muchos domingos todos eramos invitados a pasar la tarde en casa de Marianita en Carrasco donde
tena una casa grande y preciosa, decorada exquisitamente con recuerdos de los diversos pases
en que ella vivi; Blgica, China, Euskadi, Francia. Antes de llegar a su casa haba que atravesar
un bonito bosque lleno de olorosos eucaliptos que tanto abundan en este pas
Los mircoles era el da que aita daba clase de vasco, y ama lo acompaaba siempre. Mirentxu,
que era la ms joven de la clase, iba con las hermanas Beldarrin, tres seoras uruguayas de
ascendencia vasca que tomaban muy en serio la clase y ms tarde viajaran a Euskadi por vez
primera.
Aita fue nombrado delegado del Ministerio de Instruccin Pblica del Uruguay ante la VIII
Conferencia General de la UNESCO. Francisco Javier Landabiiru (nacido en Vitoria, y destacado por
su trabajo en e! exilio en el campo internacional) vino por estos das a Montevideo y junto con aita
fueron a ver a Don Justino Zavala Muniz, autor de varios libros de crnicas realistas, mitad
historia, mitad literatura gauchesca, as como de obras de teatro sobre el tema del gaucho.
Mirentxu nada ms acabar el colegio iba con los seores de Biraben a La charra todos los veranos
durante una semana. Arantza era invitada a ir a Carrasco, un balneario precioso en las afueras de
la ciudad por su amiga Martita Pizza Nogeira. Mientras ama anticipando la fiesta navidea
adornaba el pesebre en la sala, recreando la ciudad de Jerusa-ln, y siempre preparaba la mejor
cena del ao, y all todos reunidos cenaban terminando siempre los aitas con un brindis para que
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se lograra la ansiada vuelta, mientras en una silla vaca posaba un cuadro grande en colores con
la foto de Begoa, testigo mudo cuya ausencia segua hiriendo la sensibilidad familiar.
Aita ya con 54 aos segua con honda y creciente preocupacin la carga que representaba la
educacin de sus hijos. La economa familiar era el problema principal que aita enfrentaba en
estos momentos. Trabajaba mucho, y sin descanso, pero la carga segua creciendo sin parar.
Por una parte, el estar en el exilio y no poder ejercer su propia profesin, trabajaba ms y no le
renda tanto econmicamente hablando; por otra parte el no tener ningn trabajo establecido y
seguro. El buen amigo Biraben propuso a aita el trabajo de vender seguros. Su hermano era el
dueo de la casa ptica Ferrando un comercio enorme en Montevideo, y aita acept.
Era una mayor carga para l, pero por el momento eso le ayudaba mucho. En esos das recibieron
una carta de la sobrina de ama Ma. Luisa de Caracas que estaban econmicamente muy bien,
para ofrecer a aita el trabajo de gerente de su compaa de petrleo. Necesitaban un hombre de
confianza para que se ocupara del negocio cuando ellos viajaban a Europa y pensaron en aita.
El sueldo que le ofrecan era muy bueno comparado al de Uruguay. A l le resultaba fatigoso el
pensar solamente que a su edad y con trabajos tan ajenos a su preparacin podra sacar adelante
la familia, pero tampoco quera cerrar las puertas sin probar primero. Pens con resignacin en
probar durante tres meses y ver si le resultaba el trabajo, y si no volver a Uruguay.
Era una decisin muy importante y haba mucho en juego. Fueron muchas las noches de desvelo
pensando en los pros y los contras, contaba ama. Al final y no sin mucho dolor decidi partir. El
nunca pens que saldra del Uruguay si no era para ir a Euskadi. Nunca crey posible que le
esperaba otro peregrinaje, otra vez a lo desconocido, y slo dejando a ama a cargo de todo.
El 16 de julio de 1955 a las 4 de la tarde en un avin de la Pan Am, ama y sus hijos le vieron
marchar. Aita estaba muy triste, pensando qu diferente sera el viaje si hubiera sido en vez de
para Caracas, para Euskadi. No acababa de ver el momento cuanto oteara en el horizonte su
retomo.
En casa se notaba su ausencia que resultaba dolorosa para todos, pero sobre todo para ama que
esperaba ansiosa sus primeras impresiones, deseando de todo corazn que anunciara en ellas su
pronto regreso a Montevideo.
No se dio, Ama una vez mas tuvo, que levantar la casa, rematar los muebles, enseres que tenian
en el remate Sarandi, fue doloroso como la gente venia y se llevaba las cosas que eran hasta hace
poco parte de la casa del dia a dia.
Ama tuvo que empezar con e papeleo en el Consulado de Espaa, par sacarnos el pasaporte
Espaol, para poder viajar a Euskadi, con los consecuentes retrasos y demas maniobras dilatorias
de los funcionarios, que en forma adrede lo hacian,
Al fin al terminar los colegios, se decidio la fecha de partida en el barco Provence, hacia Barcelona
en un viaje de 15 dias, pasando por Rio de Janeiro, Bahia, (Brasil), Dakar y finalmente Barcelona.
La despedida desde el muelle, no pudo ser peor para cada uno de todos nosotros, cada quien
guardaba el silencio que sus recuerdos y el saber que ya no jugaria mas en la placita Varela, ni
iriamos despus del colegio a la chacra, para todos fue algo que nos marco en nuestras vidas.
Por ello digo Uruguay, mi Pais al que deje muy joven.
Uruguay, la etapa de infancia de la familia no por lo que siginifica en edad, sino por lo feliz y lleno
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Apndice de hechos que marcaron la vida de nuestra familia en los aos que nos toco vivir en
Uruguay
Semana Vasca:
Indice de lo escrito y publicado por Aita durante los meses de octubre, noviembre y
diciembre de 1943 en la prensa uruguaya.
1. La Semana Vasca
2. Los meses vascos
3. Territorio vasco
4. Antropologa
5. Msica
6. Danzas
7. Juegos y deportes
8. Mitologa
9. Religin: herejes y brujas
10. Idioma vasco
11. Literatura euskrica
12. Las Pastorales suletinas
13 Los bertsolaris
14. Escritores vascos en castellano
15. Organizacin poltica vasca
16. Tratados con Inglaterra
17. Tratados de amistad v buena correspondencia
18. El rbol de Gernika
19. Democracia y sentido de a dignidad humana
20. Nobleza universal aspectos sociales del Fuero
21. El rbol Maato
22. La mujer vasca
23. El casero
24. La industria del hierro
25. Argias y arotzas
26. Marinos y descubridores
27. Colonizadores y fundadores
28. Garibai, Urkiza, Alberdi, Larraaga...
29. "Corto en palabras... "
30. "Palabra de vasco "
31 "Vasco hermano "
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comienzan a desfilar por nuestra memoria tantos y tantos otros. Pero cuando queremos
aprehenderlas, he aqu que las brillantes figuras se difuminan. Ya no son ste y el otro sino una
sola cosa, la nica que yo puedo ver en estos instantes; el Uruguay.
Pero el corazn se anuda, la voz se quiebra, se nublan los ojos y las lgrimas caen... no
nos avergonzamos de ellas. Adis Uruguay! Todas las bendiciones que el corazn de un hombre
pueda desear para aquello que ms ama las invoca hoy para t ste que aprendi a amarle mucho
y que ya, sea lo que sea que la vida le depare, no podr dejar de amarte jams".
En Euskal Erria le dieron una emocionada despedida a ama, y a sus hijos. Fue muy
emocionante cuando un grupo de viejecitas a las que ama haba ayudado tanto, le leyeron un
poema muy sentido escrito por ellas, unos nios vestidos de dantzaris y poxpolias le hicieron una
ofrenda floral, las amigas le entregaron una medalla de oro con la fecha de ese da inscrita detrs
y un rosario de marfil, el presidente de Euskal Erria as como el Dr. Mendiola y el Dr. Mendilharsu
hablaron y ensalzaron al gran patriota y ejemplar padre que era aita. Una pena que aita no
estuviera presente, par apreciar junto a ellos este homenaje sentido que ellos a pulso supieron
granjearse.
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en referencia a la partida de
Capitulo 11.
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115
Nostalgia
VICENTE AMEZAGA ARESTI
Recopilacin: Arantzazu Amezaga Iribarren
Autor: Vicente Ametzaga Aresti
Capitulo 12.
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La obra que aqu se presenta es una recopilacin de los numerosos artculos aparecidos en
publicaciones periodsticas (diarios y revistas), conferencias en el Paraninfo de la Universidad de
Montevideo y salas de actos de los Centros Vascos, en plazas pblicas, charlas radiofnicas, e
incluso discursos fnebres, algo poco usual, y que a lo largo de su vida en Exilio, Ametzaga ,
Vicente de Ametzaga Aresti, fue publicando y exponiendo como parte de su enrgica protesta por
la libertad de nuestro pas y en defensa de nuestros valores culturales. Los detalles de su biografa
estn contenidos junto a los de su extensa produccin literaria en la nota bio-bibliogrfica que
adjuntamos, de cuya elaboracin damos datos pertinentes para su comprensin y manejo, as que
no vale la pena la reiteracin. Queremos destacar, sin embargo, los siguientes enfoques que
creemos necesarios para el anlisis y la comprensin de la obra y personalidad de Vicente de
Ametzaga, y de su tiempo histrico.
LA FORMACIN DE SU PERSONALIDAD. SUS CIRCUNSTANCIAS.
Enmarque histrico: las guerras carlistas. La Bizcaia industrializada de finales del siglo XIX. La
protesta nacionalista vasca. La Gran Guerra, 1914-18. El auge del Nacional-Socialismo. Los vascos
y el Estatuto de 1936. La Guerra Civil y el xodo vasco.
Vicente de Ametzaga nace en Algorta, puerto marinero de Bizkaia, cercano a Bilbao, un 4 de julio
de 1901, ltimo hijo de Pedro Ametzaga Abaroa y Mara Aresti Sustatxa. Acababa un siglo, el XIX,
cuajado de acontecimientos para los vascos, Espaa en general. Empez con la invasin
napolenica a la Pennsula, seguida de la prdida de Amrica (salvo Cuba) tras sangrientas
guerras, y continu con dos grandes confrontaciones: la Primera Guerra Carlista o la de los Siete
Aos (1833-40) y la Segunda Guerra Carlista (1872-76) entrelazadas ambas con continuos
alzamientos militares. Son las sacudidas sociales y polticas de un siglo en el que se derrumba por
una parte, el Imperio Espaol, y por la otra, en la que nos concierne, parece acabar con las
libertades vascas que, a travs de la historia, se han ido conservando pese a sufrir continuas
vulneraciones. La ms importante, la separacin de los pueblos vascos de un tronco comn, para
continuar una vida histrica desmembrada, unindose a la Corona de Castilla o a la de Francia,
pero manteniendo a lo largo de esos siglos de separacin, la idea de una fraternidad comn a
causa de su historia, lengua, leyes y costumbres.
No en vano, los cuatro pueblos vascos peninsulares, (ayudados enrgicamente por los pueblos
vascos continentales) luchan conjuntamente en las guerras del s. XIX, adictos fieles a la causa
carlista que promete la salvaguardia de sus fueros, o leyes antiguas. La prdida de los mismos en
las contiendas militares, a causa de la derrota y la traicin, provoca dolorosas crisis en el pas. Por
una parte, la evacuacin en masa de jvenes hacia Amrica. Lo hacen en parte por el deseo de
evitar el "impuesto de sangre" o el servicio militar, impuesto por los gobiernos centralistas, y en
esto, forman causa comn con los vascos de la parte francesa, y en parte por la inmediata
recesin econmica que sigue a la ltima guerra carlista (1872-76)..
Sin embargo es esta guerra ltima del revuelto XIX, la que va a acelerar un proceso
industrializador en Bizkaia, preferentemente, a causa de sus minas de hierro, transformando una
economa agraria, rural, buclica, en una moderna y potente economa industrial. En la mitad de
esta crisis de cambios bruscos y profundos, que afectan de tal modo a la sociedad vasca, es
cuando Sabino Arana Goiri (1865-1903), hijo de carlistas (su padre, Santiago Arana, Diputado
Foral, fue deportado a causa de sorprendrsele con un alijo de armas para la causa carlista)
117
Pero ahora estamos detenidos en 1902 y por ese tiempo Ametzaga haba nacido y su padre,
Pedro, se adhiere a la causa nacionalista. Conoce a Sabino Arana Goiri personalmente y comulga
con sus postulados. En este ambiente nacionalista, activo, romntico y reivindicador, Vicente de
Ametzaga comienza su andadura vital.
Pero los treinta y seis aos del siglo que coinciden con los treinta y cinco de la vida de Vicente de
Ametzaga, son aos trepidantes para Europa, para el Estado Espaol, y para Euskadi. En 1914 y
hasta el ao 18, dura la Primera Guerra Mundial, llamada tambin la Gran Guerra, con el fracaso
final de Alemania y la firma del Tratado de Versalles. Europa conoce una nueva peste, ms
benigna cierto es que anteriores flagelos, pero que causa enorme mortandad: la gripe espaola,
que ha de llevarse a dos hermanas de Ametzaga. La democracia parlamentaria inglesa se debate
ampliamente en las prensas del mundo que, por cierto, comienzan a asomar su poder como
cuarta columna de la democracia, hoy aceptado, entonces apenas previsto; como lo sera la
aviacin, componente militar nuevo al final de la guerra del 14, decisivo poder en la Segunda
Guerra Mundial. Fulminante poder en la ltima que acabamos de presenciar, la Guerra del Golfo.
Las revoluciones rusa y mexicana son revulsivos de profundos e inquietantes males sociales,
exponente de las nuevas doctrinas marxistas, renovadoras aunque sangrientas formas del viejo
orden que acaba en el mundo occidental, y que, a su manera, toca los extremos de Asia y frica,
marcando el principio del final del colonialismo.
En Italia y Alemania crecen los movimientos nacional-socialistas con aceptacin de sus postulados
por una gran masa de sus pueblos respectivos y con empuje y determinacin por sus dirigentes.
Alemania ve morir su Repblica de Weimer nuevamente pero parece que el resentimiento de la
rendicin de Versalles es mayor, entonces, que la visin clsica del poeta de sus poetas: Goethe.
Estados Unidos se perfila como una potencia, pese al crack econmico del 29 que hizo estallar las
bolsas y economas mundiales, aunque aun es receptor de una inmensa masa de emigrantes,
devenidos de la depresin europea. Y en Espaa, la dictadura de Primo de Rivera, que haba
durado hasta entonces, acaba, arrastrando tras s a la monarqua tradicional, para instaurarse la
Segunda Repblica, en 1931. Se forman las Cortes Constituyentes, se redacta la Constitucin, y el
jolgorio democrtico apenas deja vislumbrar la gran desdicha de su final. Se otorga el Estatuto de
Autonoma para Catalua, tras los cumplidos debates en las Cortes, lo que por primera vez una
nacin
entera
sigue
por
radio,
atentamente.
En Euskadi los aos de la dictadura se viven activamente. Pero la explosin nacionalista que
sucede a la cada de Primo de Rivera no tiene antecedentes ni paralelos histricos en el pas. La
creacin del Partido Nacionalista Vasco y ms tarde de Accin Vasca as como el Sindicato Vasco
ELA-STV, la activa prensa nacionalista y, al otro lado del espectro, la pujanza del Partido Socialista
118
cuyo lder Indalecio Prieto agrupa, en su agria y sincera protesta, a todos los inmigrantes de la
orilla izquierda del Nervin (extremeos, andaluces, gallegos) arribados a Bizkaia a fin de siglo
por la promesa de una vida mejor que la de sus tierras hambreadas y descuidadas por tiempos
seculares; la voz de protesta hecha mujer de Dolores Ibarruri que convoca a una revolucin social
para los obreros del carbn y del hierro y de las empresas dinamiteras de Bizkaia, y con ella por
primera vez, la accin de la mujer en la poltica nacional.
habra
de
recordar
Adems del Aberri Eguna, con sus manifestaciones populares, sus desfiles de ikurrias, sus
canciones vibrantes y sentimentales, (se ensaya en el pas una nueva bandera y un himno nuevo,
creados por Arana Goiri, quedando estampados para siempre en la tradicin) se van aadiendo
nuevos datos al calendario vasco que esta generacin forj para nosotros: el da de San Ignacio,
patrn de Bizkaia y Gipuzkoa, el de San Francisco Xabier, patrn del Euskera, el de San Miguel de
Aralar, patrn de toda Euskadi. Se aada la fecha de abolicin de los Fueros Vascos, tristemente
recordada por todo el pas. Estas fechas y otras ms sern fielmente celebradas al modo que ellos
impusieron: misa especial con cantos sagrados, prontamente con las letras traducidas al euskera
119
en cuanto la iglesia permite el uso de las lenguas vernculas en las celebraciones, gran festejo de
danzas populares y floreo de bertsolaris, juegos de pelota y finalmente un acto mitinesco en sus
variantes: o puramente poltico o cultural. Ame-zaga en sus aos de exilio particip con su voz y
su pluma de cada una de estas celebraciones que hermanaban a los Centros Vascos Americanos, y
los comunicaban con Euskadi. Se cumpla as, rigurosamente, con la intencin primordial
nacionalista de unin.
El Estatuto de Autonoma es conferido por las Cortes de una Repblica amenazada de muerte por
la sublevacin militar de Marruecos, en 1936. Inmediatamente se organiza Gudarostea, es decir,
el ejrcito vasco, bajo la direccin de Juan Ajuriaguerra, hombre clave en todo el movimiento
vasco de resistencia posterior, y tras los primeros bombardeos, la evacuacin de los nios a
lugares ms seguros y fuera de Euskadi. Aunque e Estatuto se otorga para lava, Bizkaia y
Gipuzkoa, debe advertirse que las tropas falangistas eran dueas a finales de 1936 de Navarra,
Gipuzkoa y lava, y parte de Bizkaia, que defenda su libertad, pertrechada tras el famoso
Cinturn de Hierro, y en la estrecha franja de su costa. Costa, por otra parte, vigilada por los
acorazados de la Marina de Guerra espaola.
La poblacin de Bizkaia estara sometida hasta julio del 37 a continuos bombardeos, a la presin
internacional que bloqueaba sus costas, y al hambre y al desasosiego que tales medidas contraen.
Sin embargo, el Gobierno Vasco constituido por las diversas fuerzas polticas del pas (desde los
nacionalstas a los comunistas) supo mantener un orden civil adecuado a las circunstancias, y un
respeto a lo que representaba.
Tomada Bilbao por las fuerzas de Mola, en julio de 1937, el pueblo vasco se desborda en un Exilio
masivo que el Gobierno de Euskadi intenta organizar en la medida de su capacidad. Colonias de
nios en Francia, Inglaterra, Blgica y aun en Rusia, hospitales para los heridos y los enfermos y
las mujeres que daban a luz, como La Roseraie, en la Euskadi continental, y en fin, un Gobierno
Vasco en Exilio, radicado en Pars (excepto en los aos de la Guerra Mundial), para seguir
protestando y defendiendo la causa de la libertad del Pueblo Vasco, que era tanto como la de su
sobrevivencia.
En todas estas acciones estuvo involucrado Vicente de Ametzaga. Como organizador de Colonias
de Nios, dirigiendo la de Donibane Garatzi, la que una vez fuera capital del Reino de Navarra,
cuando su conquista por las tropas del Duque de Alba, en 1512, pequea poblacin perdida en las
montaas de la Baja Navarra, con su castillo anacrnico, en donde los nios pudieron dormir,
comer y respirar para comenzar otra nueva andadura. Como secretario particular de Jess Mara
de Leizaola, en la Delegacin de Pars. Finalmente, como escribiente de tanta penalidad y sueo
roto en las manos como carg encima esa generacin.
Sus cargos polticos o administrativos, excepto el de Director de Enseanza del Gobierno Vasco,
no fueron relevantes. Pero s lo fue su actuacin como escritor polmico muchas veces (su
discusin con Salvador de Madariaga en la prensa venezolana levant revuelo), y las ms como
conferenciante de temas culturales e histricos, aunque sus dotes de organizador fueran tantas
veces probados con eficacia. Al Euskal Erria de Montevideo le confiri vida nueva a raz de la
celebracin de la Gran Semana Vasca de Montevideo (en cuya organizacin junto a Jos Mara
Lasarte estuvo ntimamente involucrado), as como dot de calidad intelectual a su cargo como
secretario del Centro Vasco de Caracas.
120
Durante su paso por la secretara, Ametzaga consigui una labor tanto diplomtica invitando a
personalidades de la vida pblica venezolana, como editorial (publicara tres revistas
conmemorativas) sin parangn en la propia historia de este Centro. Pero aunque fuera un hombre
afiliado en la obediencia al Partido Nacionalista Vasco, su obra y su vida deben examinarse
siempre y ante todo, en un contexto cultural ms que poltico, aunque fuese el elemento poltico la
levadura que logr la hechura de semejante quehacer.
Sin embargo, Ametzaga escribi poesa en abundancia, aunque fuera tan ntima que se negara
repetidamente a publicarla, aunque algunos de sus poemas hayan sido ya impresos en primer
lugar en la obra de Arantzazu Ametzaga "Alsina. Pasajeros de la Libertad", (Idatz Ekin, 1982) y
para alumbrar detalles de su biografa, por Mirentxu Ametzaga, su otra hija, "ere Aita" (Txertoa,
1991). y en Diciembre 2008, en un unico y completo sitio en Internet, que lleva su nombre,
http://vicenteAmetzagaaresti.blogspot.com/, en el cual su ultimo hijo Xabier Iaki Ametzaga, ha
reseado su vida, y publicado toda su obra, entre las cuales estan publicadas todos sus poemas
en vasco, en forma cronologica, asi como la totalidad de sus libros publicados, todos sus Articulos
de prensa en los diferentes Periodicos de los diferentes Paises donde vivio, asi como se resea
todas las conferencias que dicto
Ametzaga siempre se quej con amargura de que no existieran universidades pblicas, abiertas,
democrticas en el pas. Fue una queja constante a lo largo de su vida, y aunque la universidad de
los jesutas en Deusto mereci su consideracin, no dejaba de ser una Universidad de lite y
dedicada al impulso empresarial e industrial, mucho ms que al abono del campo humanstico. El
prefiri, para cursar su carrera de Derecho, trasladarse a Valladolid. No estudi su carrera de un
modo convencional: presentaba sus exmenes, preparados cuidadosamente en la soledad de su
celda de estudio, en su casa de Algorta, que posea algo que no era frecuente en los hogares
vascos de principios de siglo: una copiosa y bien ilustrada biblioteca familiar devenida de las
generaciones anteriores, atentas a la cultura, y propiciada por su madre, Mara Aresti, quien
posea una educacin poco comn para las mujeres de su tiempo. Ametzaga fue un lector
infatigable desde sus comienzos, poseedor de una gran memoria, fue inicindose en la cultura
vasca como "un viajero solitario", a su decir, y mediante el conocimiento de personajes que
marcaron estampa en su personalidad ntima, la ms destacada la de Orixe', con quien tuvo
trato.
121
Conoci a bertso-laris por ios cuales tuvo predileccin especialsima, entre ellos a Kepa de
Embeita quien sirvi ms tarde para una de sus mejores conferencias, siguiendo afanoso la obra
de Lauaxeta2, poeta mrtir en las crceles de Gasteiz. A los bertsolaris dedicara un poema
entraable que conservo manuscrito y cedo a la tentacin de transcribirlo:
Canta a la patria tierra, al verde prado, a la argoma, al helcho, al roble erguido, al maizal y al
manzano florecido, grato anuncio del zumo codiciado.
Canta al mar que en sus ondas lo mejor de la raza canta a la libertad en que ha nacido y al hogar
de los siglos heredado.
Son del vino y el agua sus canciones. De los oficios lo feliz y adverso, las comunes disputas y
opiniones...
todo en su agudo ingenio se hace verso. Y al escucharlo en la poblada plaza se alegra en l el
Genio de la raza.
Quiso ir una vez a Pamplona para conocer a Arturo Campion, legendaria figura literaria y cientfica
de la lengua vasca que l admir profundamente y cuyo personaje, Pedro Mari, tan hondas
connotaciones motiv en su espritu una vez en el exilio. Pero entonces, las comunicaciones no
eran tan fciles, y su deseo, como tantos otros, qued inconcluso por la guerra civil y su exilio
posterior.
Dice Paul Goussac... "acaso no exista documento tan significativo de nuestro carcter y de los
hbitos mentales y ambientes, como la averiguacin de los libros que hemos preferido y
admirado". Cierta es tal cosa y an ms en el caso de Ametzaga.
Para conocer como se ha forjado un hombre hay que saber qu columnas sostienen los hbitos de
su conducta, el consuelo de sus soledades ms ntimas, el recreo que se procura de modo ms
inmediato, y el conocimiento que adquiere de los dems para completar su propio alcance
intelectual.
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Cuatro fueron las bibliotecas que a lo largo de su vida acompaaron a Ametzaga. La primera y
fundamental, la de la casa de sus padres, que debi ser rica y abundante, aunque no quedan
rastros de la misma. Proli-feraban los libros de religin (Pedro Ametzaga tena profundas
inclinaciones religiosas), y los de literatura clsica adems de vidas de santos cristianos, entre las
que debieron destacar la de Vicente de Paul (cuya advocacin llevaba Ametzaga ), la de San
Francisco de Ass (con hbito de la orden terciaria enterraron a Pedro Ametzaga), y San Francisco
de Borja. Los Vicentes y Franciscos del Santoral cristiano, como gustaba repetir. Junto a estas
biografas cristianas en castellano, haba pequeos devocionarios en euskera. Hablaba de
Kardaberatz y su "Euskerare'n berri'onak" que aunque imperfecto en su euskera era el primer
registro de retrica vasca. Y de Sebastin Mendiburu, el otro jesuta, traductor de devocionarios y
elocuente predicador.
Sus obras "Jesusaen biotzare'n debozo' a" y "Otoitz gaiak", en ediciones una de 1747 y la otra de
1759, como gustaba comentar con precisin bibliogrfica, obras en las que, aunque el lxico no
fuese puro, con creces se superaba por la riqueza de su verbo y la elegancia de su sintaxis.
Aquellos traductores eran favoritos de Ametzaga para incursionar en el euskera antiguo, y los
ech en falta en su Exilio. A Mendiburu, especialmente, que era adems un elocuente predicador,
le tena predileccin especial. "El dulce Mendiburu" le nombraba y recordando su pena de exilio,
como la propia, pues conoci el exilio (al ser expulsada la Compaa de Jess por Carlos III el
Ilustrado) y fue a morir en Bolonia.
Recordaba una edicin de "Otero" de Axular, obra inmortal en nuestra lengua como solia
comentar. Y las pequeas gramticas o glosarios en varias lenguas incluso en tagalo que all, en
desorden, se amontonaban. Esto se explica porque sus antepasados fueron capitanes de navio y
comerciantes. Posiblemente tuvieron la necesidad de entenderse con gentes y pueblos ajenos, y
ya aquellos Ametzagas antecedentes buscaron el auxilio de los libros. Y dos gramticas esenciales
para la introduccin al estudio de la lengua vasca, la "Gramtica de los cuatro dialectos literarios
de la lengua eskara" de Arturo Campion, publicada en 1884, y el "Manual de Conversacin
Castellano-euskera" de Lpez Mendizabal. En 1905 sale a la luz el "Diccionario Vasco-EspaolFrancs" de don Resurreccin Mara de Az-kue, el cual adquiere mi abuelo prontamente.
Comentaba del diccionario de Aibarro "Voces vascongadas...", del de Aizkibel Epelde "Diccionario
Basco-espaol, Ilustrado", y tambin del de Astigarraga y Ugarte "Diccionario manual bascongado
y castellano con sus elementos de gramtica", as como del "Diccionario manual basco-castellano,
castellano-vasco" de Novia de Salcedo, la mayora publicados por la Imprenta de Eusebio Lpez,
luego Lpez Mendizabal, de Tolosa.
123
Compraba libros en el mercado de las Pulgas de Pars, y acumul con esmero obras de contenido
clsico, griego y latino, con sus magnficas traducciones al francs, idioma del cual ya era buen
conocedor. Esta biblioteca, sin duda exigua pues el tiempo de vida en Pars es de dos aos, queda
abandonada con todos los dems muebles y utensilios de su apartamento en la Ciudad Luz, en
1940. Ninguno de los libros que all dej los recuper jams.
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Su contacto con Andrs de Irujo, hijo de Daniel y hermano de Manuel, cofundador de la Editorial
Ekin en Buenos Aires con Isaak Lpez Mendizabal, el editor de Tolosa, tambin fue provechoso
para la ampliacin del material bibliogrfico que ambos obtenan de diversos modos. La completa
coleccin de Ekin, con sus ttulos variados en el arte, cultura, historia y derecho vasco, fue
columna vertebral de su biblioteca, adems de los libros de viejo que iba obteniendo, y el rescate
de antiguos libros clsicos. La parte de su biblioteca dedicada a la literatura clsica y a la inglesa,
del cual era apasionado lector, era francamente importante.
Asi mismo, su hijo menor Xabier Iaki, creo una localidad en la Nube eCloud, con el nombre de
Vicente Amezaga Aresti, con su biografia y su obra completa publicada, e inedita.
Quizas el simple hecho de ser su pinche, creo una relacion especial que se evidencia con estas
unicas creaciones hechas sin mas motivacion, o interes, y sin figuraciones, simplemente por ser
su hijo pequeo.
Bes con infinito amor su "Prometeo Encadenado" como accin inicial. En los catorce aos que
vivi en Venezuela, su biblioteca conoci una gran expansin. Ampli el contenido vasco con libros
y revistas que le llegaban del propio pas (sus hermanos se los procuraban), inici un importante
bloque de historia, y compr diccionarios, ms modernos, en las diversas lenguas que manejaba.
Varios libros fueron capitales para l, y en su biblioteca tuvieron asiento de honor. Una edicin del
Fuero de Bizkaia de la Biblioteca Vascongada, fecha 1897, de tapa azul. Siempre arriba de su
escritorio, a la derecha, con el poema de Tirso de Molina apoyado en una contraportada y que
gustaba
recitar
a
menudo
y
no
puedo
menos
que
transcribir:
"El rbol de Gernika ha conservado/ la antigedad que ilustran sus seores/ sin que tiranos lo
hayan deshojado/ ni haga sombra a confesos ni traidores En su trono, no en silla real sentado/
nobles, puesto que pobres electores/ tan solo un seor juran cuyas leyes/ libres conservan de
tiranos
reyes/.
Otro, su libro de oracin en euskera, un misal romano cuyo detalle bibliogrfico es el siguiente:
"Olabide'tar Erraimun, S.J. Itun Berria Bil-bo'n, Yesure'n Biotzaren Deya, 1931, 716 p. (Este
devocionario me lo regal cuando naci mi hijo Xabier, su primer nieto, para que le ensease a
rezar en euskera). El diccionario trilinge (francs, euskera y latn) en edicin prncipe, del Padre
125
Haba descubierto el filn de la Compaa Guipuzcoana de Caracas y le pareci una seal del cielo.
Sobre la mesa de su escritorio (un escritorio de cerezo dorado, estilo colonial americano),
descansaban tambin las ediciones de la gramtica y el diccionario vascos de Isaak Lpez
Mendizabal, en sus ediciones originales, infinitamente usadas, con todas sus anotaciones. Y la
edicin de "Prometeo Encadenado", tambin abarrotada de notas, letras griegas y apuntes.
Se mova entre esos haremos: La ley y la lengua de su pas, una enorme religiosidad, y una
cultura abierta a lo universal. La biblioteca de Ametzaga , al morir, fue entregada por deseo
expreso de mi madre a mi hermano Bingen y l la mantiene en Venezuela. Quiso comprarla la
Universidad de Nevada que envi un emisario con tal propsito para aumentar y completar sus
fondos bibliogrficos vascos tan importantes, y recibimos solicitud del Gobierno de Venezuela, por
encomienda de la Fundacin Boulton. Pero consideramos, a los pocos das de morir Ametzaga, que
ningn capital ni ninguna consideracin poda ser mayor que tal joya bibliogrfica, sin
desmembrarse, fuera poseda por uno de sus hijos. Puedo calcular que el volumen de libros, a la
hora de la muerte de Ametzaga , era de dos mil.
Como dato ntimo y curioso aadir que dada la escasez de nuestros recursos monetarios por un
lado, y a la enorme ilusin que mantena por formar y acrecentar la biblioteca, Ametzaga , que
gustaba del ejercicio fsico para desentumecer sus msculos, fabricaba las estanteras en madera
de caoba, la gran madera de entraa rojiza que dan los altos rboles de Venezuela,
encuadernando l mismo los libros ms viejos y desgastados, en una accin de amor y ternura
conmovedoras. Tambin tena su propio orden bibliotecolgico.
Tercamente sigui empeado en su mtodo que, desde luego, no era malo. Los libros estaban
organizados rigurosamente por materias, con un apartado para las Revistas (Egan y el Boletn de
la Sociedad Bas-congada de Estudios Bascos que reciba del pas, y la del Instituto Americano de
Estudios Vascos del que fue socio fundador). Se ocupaba de su distribucin y no le gustaba que se
anduviese sin su permiso en la misma. Nunca hizo fichaje de los libros y creo que no lo
necesitaba, pues los conoca bien y encontraba con facilidad la cita requerida, o el pensamiento
justo o el mensaje apropiado. Haba leido cuidadosamente cada uno de ellos. Sola manejarlos con
mucho cuidado pues en cada interior de los libros, Ametzaga iba incluyendo artculos de prensa,
anotaciones, ilustraciones, que iban adecuados al mensaje del libro, con lo cual cada libro era una
pequea enciclopedia en s mismo, pero una catstrofe si se lo retiraba del sitio desmaadamente.
No gustaba, sin embargo, excepto en los de estudio gramatical, marcar los libros con ninguna
anotacin. A lo ms, subrayaba con lpiz y dbilmente algunas consideraciones que parecan
importarle. Siempre que he abierto sus libros, despus, he encontrado que estas anotaciones
tenian que ver con algn pensamiento bueno o malo, pero referido a Euskadi.
126
Fue un enamorado de la cultura y la lengua griega. Repeta incansable que era una cultura que
alcanz la perfeccin en todos los mbitos: el arte, la literatura, la arquitectura, el mito. Todo
cuanto toc la mano y el cerebro del hombre griego, dio excelentes resultados. Padres de la
democracia que fue un bien que pronto habra de valorar Ametzaga como a su propia vida, lo
fueron tambin de la belleza.
Si el Partenn era la mxima expresin del equilibrio griego, el "Prometeo Encadenado" de Esquilo
era el exorcismo de la razn contra los terribles miedos que habitan en el corazn del hombre
primitivo, y tambin una advertencia a su audacia. Afirmaba que por leerlo en griego, aprendi la
vieja lengua. Y una vez aprendida, comprendi el mundo apasionante de la mentalidad clsica.
Era la sonrisa racional de la civilizacin sobre el apesadumbrado mundo antiguo. Si Esquilo fue su
autor favorito y tradujo el "Prometeo encadenado" al euskera, todos los dems autores griegos le
fueron familiares y amados. Transcurra por la Antigedad clsica con facilidad y deleite. La
"Iliada" y la "Odisea" de Hornero fueron lecturas que me acompaaron en mi infancia, y sus
personajes se trataban como a viejos conocidos. Ulises y su diosa protectora, Atenea, eran sus
favoritos.
De Ulises hablar en sus artculos de prensa. En realidad, ahora lo comprendo bien. Ulises regresa
a tica y a Penlope, regresa. Ni las riquezas, ni el deslumbre de las nuevas tierras, pueden borrar
de su corazn el recuerdo de su hogar abandonado por la guerra de Troya. Me ense a leer a
Safo en una edicin de la Coleccin Austral. Afirmaba que era admirable por su dulzura y ritmo
potico, que luego utilizara Horacio, el latino bien amado, y aseguraba que cuando compona tan
bellos versos de amor, Safo se acompaaba con una lira. No me era difcil imaginar a la bella
mujer sobre el promontorio de Leuca-des, llorosa de amor y dispuesta a arrojarse en las aguas
turbulentas. Luego estaba Pndaro, el grande de los lricos griegos, y su rival Corina, una mujer
tambin. Y los historiadores Herodoto, Tucdides, Jenofonte, Foli-bio, Estrabon. Y Demstenes. De
Demslenes haba mucho que aprender. Es limpio y sereno, sin ser fro. Su razonamiento va
derecho al objetivo, en un estilo vigoroso, impetuoso, pero nunca superfluo, manteniendo siempre
la atencin del pblico. Estas fueron consideraciones que Ametzaga logr mantener en sus
discursos.
127
innecesaria. "No hay que emborrachar ni marear al lector. Hay que prodigarle siempre luz pura''.
De las fuentes latinas, de las cuales se nutri abundantemente, hablaba mucho de Cicern. Quiz,
como fue hombre de discurso elocuente, Cicern se convirti en maestro del mismo. Tradujo de
Cicern "La amistad" y "La vejez". Pero Tcito, Horacio y Virgilio fueron lectura obligada en su
latn original.
Tuvo predileccin por Plinio el Joven, por su epistolario, algunas de cuyas cartas tradujo. En la
conferencia impartida en el anfiteatro de la Universidad, perteneciente al ciclo organizado por el
Servicio de Arte y Cultura del Ministerio de Instruccin Pblica del Uruguay, al final, Ametzaga
hace una confesin ntima, raras veces manifestada por l en pblico. Dice no saber exactamente
por qu elige el tema de Plinio El Joven. Y lo explica como un conjuro y distraccin del tema
angustioso que ocupa su vida, acogindose al remanso de la Antigedad Clsica. Elige adems a
Plinio, como un valor de pulcritud moral en un mundo que parece haberlos perdido. Haciendo suya
la frase del cordobs Sneca, Ametzaga concluye esta maravillosa conferencia con la sentencia
que, en realidad, corona su propia vida: "Despreciable cosa es el hombre cuando no se levanta
sobre su esfera".
Examinemos las fuentes que nutrieron su limpio castellano. Lo habl de cuna, aunque su madre
era euskeraparlante. En esto, su padre actu como primera y determinante influencia ya que
hablaba un castellano sobrio y perfecto, enemigo de todo localismo. Ametzaga sola comentar de
las veces que su padre le reprenda por alguna palabra intrusa en el severo lxico castellano
utilizado en casa, y su tenaz observacin de que cada idioma deba ser hablado con el mximo
rigor, propiedad y esplendor, ya que la lengua era la expresin de la inteligencia del hombre. En
tal sentido, el castellano de Ametzaga careca de "muletillas", aun el coloquial, y de palabras mal
sonantes. "Cada cosa tiene su propia denominacin y a esa hay que acudir", era algo que repeta.
Cules eran las fuentes literarias de su castellano? Pienso que la lectura ordenada, paciente,
cuidadosa de los dos grandes Luises de la Literatura Castellana. De Fray Luis de Len repeta
incesantemente aquellos versos:
"Que descansada vida/
la del que huye del mundanal ruido/
y sigue la escondida/
senda por donde han ido
los pocos sabios que en el mundo han sido!
128
Fray Luis de Granada fue su lectura obligada hasta el final de sus das. En ambas vertientes lo
utilizaba: en la religiosa, con su profundo sentido asctico, y en la gramatical por la limpieza de su
expresin.
Era adicto a la lectura de Teresa de Jess quien, sin embargo, introdujo populismos en la lengua,
y gustaba recitar "Los versos nacidos del fuego del amor de Dios que en s tena"...
"Vivo sin vivir en m, y tan alta vida espero, que muero porque no muero"
Predileccin por San Juan de la Cruz. Su "Cntico espiritual entre el alma y Cristo su esposo" fue
lectura obligada de muchas noches de mi infancia cuando ni entenda el significado, pero me
deleitaba la recitacin limpia y pura de Vicente de Ametzaga de aquel castellano que era extrao a
mis odos, nuevo. El castellano del Uruguay, con su sabor andaluz, cantarino, sin zetas ni jotas,
distaba mucho del hablado por Ametzaga.
Estos fueron sus maestros primeros y constantes en la lengua que dominaba a la perfeccin con
enorme riqueza de vocabulario y gran seoro. Fueron, pues, los grandes msticos quienes
impregnaron su espritu. De ellos, Ametzaga obtuvo el don que funde "lo vivo de la lengua
hablada con lo culto del latinismo renacentista y lo potico del estilo bblico" en acertada frase de
ngel Del Rio ("Historia de la Literatura Espaola").
Porque Ametzaga fue lector vido de la Biblia, sobre todo de los excelsos apartados salmticos.
Los Salmos fueron oraciones constantes en nuestro hogar. Abra el libro y los recitaba en voz alta,
msica celestial para mis odos, y puso especial empeo en que aprendiera lo que l denominaba
el mejor de todos los Salmos, y no era del Salterio: el Magnifica! de la Virgen Mara. Tambin me
haca recitar en voz alta el cntico de Deborah que, me insista, era un conjunto de unidad de
pensamiento, bien establecido, armoniosamente entrelazado.
De Miguel de Cervantes fue lector de sus "Comedias Ejemplares" que me ense a leer siendo yo
muy nia, quiz descubriendo mi vocacin, ms inclinada al gnero novelesco que al rigor
acadmico. Sola leer tambin partes del "Quijote" y hasta tuvo la tentacin de traducirlo al
euskera. Pero se limit a la traduccin del "Licenciado Vidriera".
De la generacin del 98, la que nutri su juventud, Ametzaga era atento lector de Pi Baraja y de
Miguel de Unamuno, pero creo que Clarn se contaba entre sus lecturas habituales. De l pudo
aprender el estilo periodstico, ese estilo que debe ser fcil y atractivo para el lector, aunque para
el escritor signifique el esfuerzo mximo de concisin: buscar la palabra oportuna, el dato preciso,
la idea certera. "Acierto al empezar, direccin al progresar y perfeccin al acabar", segn la
oracin de Santo Toms de Aquino que tanto gustaba repetir y que incluso la tena manuscrita
sobre su propio escritorio, junto a otra, la ms bella de todas, segn l, que era la de San
Francisco de Ass, por quien tena devocin.
"Oh Seor, haznos instrumentos de tu Paz. All donde haya odio, que nosotros pongamos amor..."
Esta oracin la tena en italiano, y ms tarde en ingls, (enmarcadas) traducida por l mismo.
Jams se la escuch recitar en castellano.
129
De Gregorio Maraen, contemporneo suyo, Ametzaga tambin absorbi, como hombre abierto a
todas las tendencias. Si en Maran el amor a Castilla, a sus personajes, a su historia,
engrandece su obra escrita por cierto en un castellano rico y dinmico, Ametzaga converge sus
temas al asunto vasco, con la misma facilidad, erudicin y gracia. Pero su autor contemporneo
favorito va a ser, sin duda alguna, Juan Ramn Jimnez. Jimnez, hombre a caballo entre la
generacin del 98 y la del 27, es poesa hecha miel. Ametzaga se enamora de Platero
incondicionalmente. Platero, una elega andaluza como la denomina su autor, es como todas las
cosas humildes, excelsa. Es un burro pequeo, peludo, suave, como hecho de algodn, dice el
poeta, y va trotando alegremente a travs de la obra, con su trotecillo alegre, tierno y mimoso
como un nio, pero fuerte y seco como una piedra.
Esta dualidad de Platero le gusta a Ametzaga . La hace suya. Es la dualidad de los poetas, dira
siempre a raz de Platero, el burrillo que al morir convierte su alma en una mariposa de tres
colores. Lo traduce con amor especialsimo en Montevideo, en 1953. Lamento que la carta
autgrafa en la que Juan Ramn Jimnez le otorga el permiso.
La carta era seca, cortante, al estilo de Jimnez. Toda su ternura la deposit en Platero. La dej
ah, intacta para nosotros. Bueno es destacar aqu que, atravs de Juan Ramn Jimnez y las
traducciones de Zenobia Camprubi, Ametzaga accedi a la Literatura Hind, al extraordinario
poeta Rabindranath Tagore, que actu en la independencia de la India desde su postura de
escritor. Era una lectura amable que le apasionaba. Deca que daba paz al espritu.
El se permita descansar de tantos trabajos literarios con novelas de aventuras, escritas por Emilio
Salgan. Le divertan y relajaban enormemente. Al final de sus das, de ese ciclo oriental,
Ametzaga
dej
traducido
del
ingls
el
poema
persa
de Ornar
Kayham.
130
Nos hemos referido a las fuentes que nutren su castellano, pero no a las que nutren su euskera
aprendido tardamente, a la edad de 18 aos, y con una vieja gramtica, posiblemente la de
Lpez Mendizabal. Pero an en su entorno, el euskera, aunque en retirada, era hablado por el
pueblo. Su propia madre, Mara Aresti, mantena conversaciones con las mujeres que le ayudaban
en el mantenimiento del hogar.
Una vez conseguidos los pasos elementales para su comprensin, Ametzaga acudi a estas
conversaciones domsticas, registrando cada uno de los modismos dialectales de estas mujeres
de los caseros cercanos. Pero sobre todo trabaj con su cuada, Adela Madariaga, que hablaba un
euskera bizkaino muy puro y abundante. Adela, que era mujer de gran belleza y enorme
inteligencia natural, ayud a Ametzaga a introducirse en los vericuetos de la lengua de los vascos.
Saba refranes, modismos arcaicos, y de memoria recitaba antiguas oraciones. Ametzaga copiaba
aquellos datos esenciales para la reconstruccin de una lengua que llegaba viva desde la
Prehistoria, pero indudablemente fragmentada.
La encomiable labor del Prncipe Bonaparte, a mediados del siglo pasado, fue una labor de
reconstruccin en la que cont con la colaboracin de prrocos y predicadores, entre ellos
Aibarro, estudiando las diferencias dialectales, editando libros religiosos que las exponan, ya que
la literatura vasca se dedica especialmente a la labor religiosa, y en concreto a la traduccin de
catecismos, y finalmente elabor un mapa del alcance geogrfico del euskera. Esta tarea,
conocida por Ametzaga , fue la que l hizo en cierta manera con su cuada Adela, el mismo
recorrido histrico hacia atrs. Adela Madariaga saba historias, cuentos de viejas abuelas, mitos
que al no trasladarse al castellano iban durmindose en la memoria colectiva. Ametzaga,
encantado con su trabajo de reconstruccin, pronto se hace con un diccionario confeccionado por
s mismo de palabras, de modismos, incluso, de palabras vascas ya utilizadas en el castellano del
viejo puerto de Algorta.
Esos fueron los comienzos. Ms tarde, Ametzaga se dedicara a la labor enjundiosa de traduccin
de los clsicos de la literatura mundial, y a la enseanza del euskera. Las primeras andereos del
pas fueron formadas por su Departamento del Gobierno de Euzkadi, y siempre en su Exilio,
concedi tiempo a la enseanza del euskera. En las cubiertas del vapor "Alsina", en los campos de
concentracin de frica, y en los Centros Vascos de Montevideo y Caracas.
Ajeno an a la gran polmica en la que habran de ensarzarse las facciones de los intelectuales de
la lengua vasca, Ametzaga , siguiendo los postulados del Prncipe Bonaparte, entre los variados
dialectos del euskera elegir rotundamente el denominado vascn (especialidad dialectal de
Guipuzkoa, Laburdi y el Alto Navarro). Segn su sentir es bueno como modalidad nuclear del
centro geogrfico, histrico-lingstico del pas, completndolo y revistindolo con formas de los
otros dialectos, pues todos son la suma enriquecedora de una lengua. Cita a Breal "La verdadera
vida del lenguaje se concentra en sus dialectos", pero acepta que debe uniformarse para
convertirse en herramienta de uso literario, cientfico, gramatical.
Explica claramente sus mtodos de traduccin, sus dudas, sus resoluciones, en el trabajo
"TVaduccin de obras literarias al euskera", enviado en su momento al VIII Congreso de Estudios
Vascos, en 1954.Recibi su titulacin como Acadmico de la Lengua Vasca por Euskaltzaindia, con
emocin y recogimiento extraordinarios. Su ttulo, al lado del concedido por Alfonso XIII, como
Licenciado en Leyes, adornaban su biblioteca. Condensaban los esfuerzos de su vida. Y su orgullo
131
Pero si stos eran los ejes de su vida, como hombre dedicado a la cultura y al pensamiento,
estaba conectado con las grandes literaturas universales, con la historia de los pueblos y sus
costumbres. Fue atento observador de las mismas all donde las vio, y cuidadoso y respetuoso con
las nacionalidades, creencias y principios ajenos. De la gran literatura universal que ley
apasionadamente, Ametzaga prefiri, despus de la griega, la inglesa. Ley vidamente la obra de
las grandes escritoras del siglo XIX ingls, entre las que prefera a Jane Austen. Tambin fue lector
de Dickens y sus cuentos de Navidad. Pero, sobre todo, ley a William Shakespeare.
Para l, no hubo mejor escritor ni quien mejor descubriera los profundos avernos del alma
humana, sus pasiones, ambiciones, deseos, sueos, aoranzas, amores, deslealtades y locuras.
La dedicacin a la lectura y el placer que le proporcion Shakespeare fueron semejantes a los que
le proporcionaron su conocimiento de Gran Bretaa. Estuvo all, en 1938, unos meses y qued
cautivado para siempre del orden, la flema y la vida inglesa. Tradujo a Shakespeare desde esos
barcinos, con emocin y rigor al mismo tiempo. Su "Hamlet" traducido al euskera en 1953,
publicado por la Editorial Ekin, fue una obra de la que siempre se mostr abiertamente orgulloso.
Seguira "Macbeth", "El sueo de una noche de Verano", "Julio Csar"... A Shakespeare lo tena en
ediciones en ingls, en castellano, en traducciones francesas, en glosarios, en citas diversas.
Hablaba de Shakespeare con la naturalidad y el conocimiento que se puede hablar de un vecino.
Pero haba un escritor ingls que me ense a amar y que no fue tan grandioso como
Shakespeare, y an ms, por aquel tiempo, a causa de su reputacin personal, era hombre
maldito: Osear Wilde. Sus cuentos, sus obras de teatro, con aquel deje irnico y sutil, delicioso.
Pero nada en Wilde gustaba ms a Ametzaga que la "Balada de la Crcel de Reading", la cual
tradujo prontamente al euskera. La introduccin de la "Balada", la confesin de un alma herida,
recluida por amor, as fuese un amor maldito, producen escalofros. La frivolidad de Wilde queda
atrs. El dolor le acompaa, y el sacrificio, y el deshonor, y la ruina. Y entonces, la grandeza
aparece en todo su esplendor. Es el poeta de la amargura pero sin perder la delicadeza.
Aparte de estas lecturas constantes, Ametzaga ley abundantemente los clsicos de la literatura
francesa y alemana. Pero no con esta intensidad con que me refiero a los autores que he ido
nombrando, al menos, conmigo. Y creo que se puede apreciar en sus obras de traduccin que, en
su momento, deben ser analizadas y estudiadas con mayor profundidad y rigor. Ahora, tratamos el
tema de sus artculos periodsticos, sus conferencias y sus poemas, todos proyectados en esta
recopilacin. En eso, seguimos.
132
La letra de Ametzaga era pequea, clara, concisa. Era la letra de toda una generacin. Cuidadosa,
perfecta en la sealizacin de las letras, bien marcados los acentos, registrados todos los signos
de puntualizacin. Para tanto como escribi, jams utiliz abreviaturas, y solamente en
Montevideo compr una mquina Underwood que durante aos le sirvi para pasar a limpio sus
originales. Escriba a lpiz. Rara vez utilizaba la pluma fuente o el bolgrafo. En su escritoriobiblioteca, con msica clsica de fondo, gustaba de Beethoven y Rimsky Korsakov,
especialmente sentado muy derecho, durante horas, se sumerga en ese mundo particular de
traducciones y lecturas que era el suyo. Ya en Caracas, compr una mquina de escribir ms
moderna que la vieja y ruidosa Underwood, pero aseguraba que aunque era necesario para
facilitar el trabajo de la imprenta y la propia lectura de correccin, nada era ms grato para un
escritor que la sensacin de trasladar el pensamiento, por la mano, al papel, acompaado del
suave rasgueo del lpiz. Era como la lira de Safo...
Era un hombre metdico y ordenado. Tenia sus fichas, sus citas, sus anotaciones, cuidadosamente
archivadas, al alcance de su mano. Jams vi desorden en su mesa de trabajo. Segn l, la
claridad de pensamiento comenzaba con el orden fsico. Toda su correspondencia, muy copiosa,
con su amigo el Presidente Aguirre, con Manuel y Andrs Irujo, con Telesforo Monzn, Jos Mara
Lasarte, y otros, estaba cuidadosamente en carpetas, clasificada. En realidad, Ametzaga acometa
sus tareas, as fueran las de su correspondencia ordinaria, con el rigor de un cientfico.
La voz le fallaba a Ametzaga . Sola padecer de una cierta ronquera matinal y sufra de afonas
frecuentes. Era, sin embargo, una voz melodiosa, suave, aunque viril. Cantaba maravillosamente
y lo saba, tanto que aprovech muchas de sus conferencias para poder cantar. Una de sus penas
era no ser bertsolari. Le hubiera gustado parecerse a Pedro de Embeita, mucho ms de lo que l
mismo se permita asegurar. l poeta inspirado bajo la lluvia de Euskadi, cantando como un
ruiseor en el mes de mayo, cerca de los rosales silvestres florecidos. Era la imagen ms
romntica de la poesa, y Ametzaga aspir a ser un poeta entre todas las cosas. Era un afn de
superacin total de cuantas cosas emprendi.
Para preparar su voz para los actos pblicos, salas de conferencias, plazas pblicas o la soledad de
los cementerios, Ametzaga recurra a elementales remedios caseros, Claras de huevo batidas,
grgaras, y mucho silencio haba antes de las conferencias, a las que acuda con gran
nerviosismo. No llevaba nunca el texto escrito. Sino apuntes esenciales. Su abe, como deca, un
guin, con el cual se iba orientando ante el pblico.
Por supuesto, haba estudiado concienzudamente el tema a exponer, incluso lo haba ensayado
previamente pero sin voz, as que cuando el discurso lo haca en pblico era una especie de
aventura. Sin embargo, era una aventura dirigida. El reloj determinaba su tiempo exacto. Jams
se sobrepas un minuto del tiempo acordado. "Es una cuestin de respeto", deca. "No se debe
cansar al pblico, ni al lector. Se le debe emocionar, entretener, pero nunca cansar".
Resulta extrao, ver cmo la emocin exaltada de Ametzaga , que lograba siempre provocar
lgrimas en su pblico y que sin duda era una emocin profunda, sincera, ardiente, estaba por
otra parte bien limitada, controlada y supervisada. Eran dos facetas de su personalidad muy
definidas y que hacan posible en l dos cosas aparentemente antagnicas: ser un romntico, pero
al mismo tiempo un hombre de accin. Quiz esto era la herencia de sus fuentes literarias
castellanas. Esa combinacin del... "espritu mstico con un activismo, un realismo y un
133
sentimiento directo de la vida, que suelen considerarse incompatibles con el estado contemplativo
de las facultades humanas que la percepcin mstica requiere..." (Sigo aqu en la lectura de ngel
del
Rio).
Ametzaga podra aadir mucho ms, en este anlisis de su obra y personalidad. Y es que el
hombre vasco es en s activo. Pero tambin ordenado. Nada en el vasco recuerda al hombre
dionisaco, excepto en la noche del akelarre. El vasco no es desmedido. No lo es tampoco su
entorno,
por
ms
furioso
que
pueda
parecer.
Hay
una
contencin
vasca.
LA EXPRESIN DE VICENTE AMETZAGA EN EL EXILIO. SU ETAPA DE BUENOS AIRES,
ARGENTINA.
Ametzaga llega a Buenos Aires en 1942. Ha salido de Bilbao, Euskadi, en junio de 1937, recin
casado con Mercedes Iribarren Gorostegi. De 1937 a 1941 aunque establece domicilio en Pars,
donde nacen sus dos hijas mayores, Miren y Begoa, ha estado viviendo en Donibane Garatzi
(Baja Navarra, en la Euskadi francesa), Barcelona, Catalua, como Delegado del Ministro de
Cultura del Gobierno Vasco ante el Ministro de Cultura de la Repblica Espaola, y en Londres,
Inglaterra. Termin la Guerra Civil Espaola en 1939, pero el 2 de setiembre de ese ao y el
mismo da en que nace su segunda hija, estalla la Guerra Mundial. Se impone el abandono de
Pars, en primer lugar, y ms tarde el de Europa. Las fuerzas conquistadoras de Europa eran
aliadas de Franco. El presidente de Catalua, Companys, fue entregado por los alemanes a
Franco, y fusilado descalzo sobre su tierra catalana, tal cual fue su ltimo deseo. La amenaza de
un regreso forzoso y castigado con la ltima pena era, pues, real.
En junio 15, de 1941, un barco, El Alsina, el ltimo que zarp de Marsella, lleva a bordo camino
de Amrica. En ese barco va tambin Niceto Alcal Zamora, ex-Presidente de la Repblica
Espaola y un sin nmero de personalidades cuya lista puede verse en el libro "Crnicas del
Alsina, Pasajeros de la Libertad"3. Durante quince meses permanecen mis padres en variadas
situaciones, la ms difcil, un campo de concentracin en Sidy-el-Ayashi, frica. Terminarn su
viaje en barco portugus. El Quanza, fletado gracias a los buenos oficios de Indalecio Prieto, ya
residenciado en Mxico.
Esta etapa de su vida itinerante es fecunda en poesas ntimas, que expresan sus emociones ante
los acontecynientos extraordinarios de quien no pens jams en salir de Algorta. Para l,
Chesterton, ese gran escritor ingls, que al iniciar un viaje dispone, con esa irona inglesa, que su
destino es precisamente volver a casa, es todo un smbolo. Pero viajero impenitente, habr de
deambular todava por varios pases hasta conocer el descanso final en Caracas, Venezuela. Estas
sensaciones las explica en un artculo incluido en este volumen, "La Comarca y el Mundo", escrito
en 1953.
Quiz pensara en publicar estos poemas, en algn momento, pues en la introduccin de su charla
"Plinio el Joven, a travs de su epistolario", en la Revista Nacional de Montevideo, se asoma la
intencin de publicar un volumen de poemas y titularlo "Mis rincones mgicos", as como un
estudio sobre "Los vascos en la Literatura castellana". De esto ltimo no nos ha quedado ejemplar
ninguno manuscrito. Adelanta una conferencia sobre Berceo, que servir ms tarde como captulo
en el "Hombre Vasco". La intencin de este estudio es revelada en 1954. Faltaba poco para que
134
Ametzaga dejara el Uruguay y emprendiera una nueva vida en Venezuela. Puede decirse, de lo
que s, que es su nico proyecto inconcluso.
En Buenos Aires conecta con el "Laurak Bat", decano de los Centros Vascos Americanos, centro
fundado en 1878, inmediatamente finalizada la Segunda Guerra Carlista, accin de los primeros
deportados de la misma arribados a la Argentina. La accin de acogimiento de estos vascosargentinos para el recibimiento de los exiliados del 37 merece un captulo extenso. Baste, sin
embargo, saber que procuraron casa, comida, trabajo y aliento a esa humanidad desfallecida que
vena con la amargura de su guerra perdida, de su hogar abandonado y de su nacionalidad rota.
Aunque sus necesidades primordiales son las de recomenzar una vida y atenderla
econmicamente, con su esposa nuevamente encinta, Ametzaga no deja de prestar servicio
inmediato a la causa vasca. Es cofundador del Instituto Vasco de Estudios Americanos, y poco ms
tarde redactor de su Boletn. Al mismo tiempo comienza con la idea de la Semana Vasca de
Montevideo, importante evento cultural del Sur. Cuando se inaugura la Gran Semana Vasca de
Montevideo como se la nombr desde entonces, en octubre 30 de 1943, Ametzaga est residiendo
en Montevideo, Uruguay, y dedicado de lleno a los preparativos y organizacin de la misma. De
Buenos Aires trae una hija de nueve meses, Arantzazu, y la amistad renovada de los viejos
camaradas vascos, entre las cuales habrn de destacar en su vida, y para siempre, la de Jos
Mara Lasarte y la de Andrs de Irujo.
Jos Mara Lasarte, valor extraordinario del Exilio Vasco, adems de ser un amigo ntimo, un
confidente, es, por dos veces, quien decide una partida de Ametzaga. En Buenos Aires, es Lasarte
quien le indica el camino de Montevideo. En Caracas, es Lasarte quien lo llama y quien le propone
para la Secretara del Centro Vasco, queriendo repetir la amplitud que Ametzaga le confiri al
Euskal Erria de Montevideo. Lasarte, gipuzkoano, es un espritu sutil, un hombre ilustrado, un
poltico sagaz. Fue adems un gran amigo. Padrino del primer hijo varn de Ametzaga, Bingen,
quien quiso as fundir ms estrechamente sus lazos de amistad, y ya al final de sus das, para m.
la figura del padre-gua en tierra vasca.
Andrs de rujo por su dedicacin a la Editorial Ekin, que Ametzaga consideraba la empresa mayor
de los vascos en el Exilio, por su perdurabilidad y trascendencia, tambin se contaba entre sus
ms caros amigos. Cuando mucho ms tarde, ambas familias se fundieron en una por el
matrimonio de Arantzazu con Pello Irujo, tanto Manuel como Andrs y Ametzaga lo festejaron
gozosamente en su abundante, ntima y tierna correspondencia personal. "Nuestro Exilio, as con
maysculas, no ha sido en vano, Vicente", apuntaba Manuel Irujo, el navarro de Estella, desde
Pars, al bizkaino de Algorfa, que en Caracas llevaba al altar a su hija, nacida en la Argentina, para
casarla con Pello Trujo, hijo de Eusebio, nacido en Laburdi y residenciado en Caracas durante
veinte aos. Ciertamente era el milagro del Exilio. De los Centros Vascos del Exilio.
135
Una fotografa en blanco y negro, de gran tamao, presidi su biblioteca durante todos los aos de
su exilio, tanto la de Montevideo como la de Caracas. La miraba y besaba con sus ojos y a veces
tambin con sus labios aorantes de amante sin retorno.
A m, intrusa visitante de su paraso, me sealaba los lugares mgicos, tan frescos en su memoria
aunque iban pasando los aos de su exilio, cinco, diez, veinte. ..."aqu estn las piedras rojas que
dieron nombre a mi pueblo y al tuyo, los contornos de Erriberatxu, trepamos por Erriberamune, y
ves?, aqu las piedras venerables de Etxetxu. De ah bajamos por las escaleras de piedra a
Asuarka y nos quedamos contemplando el castillo de Kakaleku... hay que bajar mucho,
recorriendo todo el puerto, oliendo a brea y sal. para llegar a caminar sobre la arena dorada de
Ereaga, y al final de todo, la Pea de Galderetxe que no es ms que un punto de tierra vasca
emergido entre las aguas del mar de Bizkaia".
Algunos de sus artculos fueron publicados, otros, en forma de poemas, los mantuvo en una
carpeta cerrada, cuidadosamente inscritos a mquina pero pudorosamente recogidos. S para
Euskadi en general era un hombre de voz reclamante, en pleno ejercicio de su condicin de
exiliado en protesta contra un rgimen militar, para Algorta dedic la parte ms ntima y
candorosa de su corazn de poeta.
.. Mi cuna es Getxo que al bramar severo del mar escucha en la spera Bizkaya; como lo fue de
mi linaje entero en cuatro siglos de que prueba haya. Los nombres de los viejos caseros forman
la lista de apellidos mios.
Ametzaga fue caballero bien cumplido
en ttulos, conducta y decoro,
y vio de muchos hijos bendecido
su hogar y el de mi madre, a quien adoro.
El ltimo soy de aquellos que "Iturrieta",
mi vieja casa, vio nacer, repleta.
En piedad por mis padres educado, religioso guard juventud pura; y entonces como hoy, ya de
edad mediado, la palabra de Cristo hizo mi hartura: Que aunque de faltas y miserias lleno, nunca
temor de Dios falt en mi. seno.
Siempre viv en la paz, hasta que un da, la rebelin que se engendr en Espaa, con ansias de
exterminio y tirana, de mi patria a morder vino la entraa. Con justicia y nobleza defendimos
136
Y he aqu que hoy no tengo patria tierra, ni derecho a mi pueblo y natal casa. Y el camino a los
mios se me cierra cuando la sed de verlos mi alma abrasa.
Ametzaga fue un hijo tardano, el ltimo de los seis que concibi Mara Aresti, mujer bella e
ilustrada, dndolo a luz a los casi cuarenta y cinco aos. Su hermana mayor haba sido la primera
mujer de Pedro Ametzaga, muriendo al dar a luz una hija que apenas le sobrevivi, Mara Ins,
nacida un veintiuno de enero, y dejando un hurfano de dos aos, Pedro. Mara Aresti decide
casarse con Pedro Ametzaga para cuidar del pequeo sobrino, ms tarde su hijastro, y tienen seis
hijos ms. Solo dos hembras, Blanca y Mara, y ambas mueren en el espacio de meses y en plena
juventud, afectadas por la gripe del 18. Muere al poco Pedro Ametzaga y emigran por una serie de
infortunios econmicos, Pedro y Manuel, los dos mayores, a la Argentina, regresando Manuel a los
aos.
Mara Aresti se encontr con que la familia numerosa que haba criado y protegido quedaba
desmembrada. Su unin y afecto por el hijo pequeo y, ms tarde, su orgullo por saberlo hbil en
los manejos intelectuales, creci hasta convertirse en devocin.
Cuando Ametzaga se exilia en 1937, su ltimo acto, con Mola en las puertas de Bilbao, es ir a
despedirse de la mujer anciana y prometerle un pronto retorno. Ella sabe que ya no hay
reencuentro para ellos. Le bendice y lo apura a la partida. Por su apostolado nacionalista, Mara
Aresti se queda en la calle al da siguiente de la entrada de los nacionales. Por caridad, fue
recogida por los parientes de una de sus nueras.
El exilio es un universo inmenso. Caben en l los sentimientos tiernos y depurados de los que
Ametzaga es exponente fiel, pero tambin los desengaos crueles. Son gentes del pueblo las que
delatan y acechan. Del caldo de cultivo de los viejos resentimientos sociales surgen las delaciones.
El militar triunfador poco tiene que empujar para que stas afloren o se multipliquen. Los vencidos
en la contienda civil se quedan sin recursos, sin valimiento ninguno ante la crueldad del castigo
impuesto. Son encarcelados, fusilados, confiscados. El miedo como una trepadora maligna entra
en los corazones de los que una vez proclamaron abiertamente sus ideas, con honestidad y
respeto, y hace callar sus voces por un largo tiempo que en muchos dura hasta la muerte.
Ametzaga escribi sobre eso de este modo:
"Si malo es amar sin ser amado,
y malo es el temer y el ser temido,
y sentirme que se es compadecido
de aquel de quin siempre fue uno envidiado;
S malo es odiar y el ser odiado
de quien a ms que nadie hemos querido,
y del presente mal estar vencido
en el recuerdo de un feliz pasado:
Trocara yo estos odios y temores, envidias, compasiones, y desprecios, por este mi esperar sin
esperanza:
fatal engao de los hombres necios que ponen la ilusin de sus amores en un bien que lo es, slo,
137
en lontananza.
Porque en el exilio se mueven sentimientos contradictorios. No todo es tan romntico como puede
apreciar un observador poco agudo.
Se sabe que ha sido traicionado por una parte de los suyos y por ellos rechazado. Se sabe adems
que la persecucin alcanza no tan solo a las familias que han quedado en el pueblo, como el caso
de Mara Aresti, sola y anciana, sino aun a los que han logrado salir. Las embajadas de Espaa
fueron en eso activos frentes de choque contra la labor comunitaria de los exiliados que
pretendan rehacer sus vidas con un mnimo componente de orden. Y en esas embajadas
pulularon muchos vascos, algunos, compaeros de estudios, tertulias o simplemente amigos del
pueblo.
Solo una tormenta de nieve, y lo pongo como ejemplo, evit que el delegado de la embajada
espaola en Paris, y enviado con urgencia para tal objetivo, detuviera el barco El Alsina, que
zarpaba en enero de 1941 de Marsella, llevando a bordo principales exiliados republicanos y
vascos. Lequeriea, embajador por entonces en Paris, tiene en su haber el haber intentado un
canje de prisioneros pero fue rpidamente disuadido por Franco de semejante accin. Los
exiliados deban pagar cara su afrenta de rebelda, de insumisin, de protesta.
Pero el man de ese desierto fue el amor y la esperanza, transformados en la accin que
emprendieron en los centros vascos, logrando de tal manera disipar la amargura de tanta derrota.
La protesta pacfica fue la reconversin de sentimientos diversos. Algunos muy agrios, otros muy
dolorosos. El desterrado vasco en general, y ah est su obra para demostrarlo, depur hasta el
final el cliz de su inmensa amargura pero transform esas fuerzas negras y tenebrosas en
blancas y resplandecientes realizaciones.
Ametzaga, para quien Algorta era la representacin de cuanto tuvo forzadamente que abandonar,
lo describe en estos versos en euskera, que son la miel pura que destila de sus sentimientos y
anhelos:
". .Naiago dot txikitan ibiltako basterra bertoko oroigai arro ta ederdunak baio Sena baio
atseinago
ene
Gobela
alperra
eta London andiko ta Paris argiko zoragarri gustial ezatan ez dodaz itsas-gaieko Algorta ederran
gomutaz"
Para su corazn, para sus ojos, para su condicin de enamorado y amante, Algorta, el sitio donde
anduvo de nio, era el paraso de todo su afn. Ni el Sena, ni el Tamesis, ni despus el Ro de la
Plata, grande como un mar, o el Orinoco, padre de las aguas, pudieron compararse a la alegra
fresca y humilde pero preciosa a sus ojos del ro de su pueblo, el Gobela. Ningn paisaje, ni la
extensa llanura africana, ni las cosmopolitas, cultas y esplndidas capitales europeas, ni las
vibrantes, gigantescas y magnficas capitales americanas por donde deambul, podan ser
comparables, en el fondo de su corazn enamorado, a los encantos mgicos de Algorta.
Creo que estas consideraciones son importantes. Estos poemas se escribieron con total sinceridad
pues jams fueron publicados y no creo que Ametzaga aprobara la exhibicin de sentimientos tan
turbadores a un pblico. Pero me parece bien que en este captulo se contemplen pues iluminan,
con mucho, no tan solo la desesperada nostalgia que mantuvo, sino la inquebrantable fidelidad. Y
en eso, Ametzaga no fue una excepcin. Quiz l pudo adornarlo con su maestra literaria, pero
138
Hay que tener en cuenta que Ametzaga tiene presente y pendiente en primer lugar el sustento
econmico de su hogar que en 1943 estaba compuesto por su mujer y una hija recin nacida. Dos
hijas, las mayores, quedaron en Europa y les era imposible el regreso, mientras la Guerra Mundial
perdurara. Pero eso no restaba un pice a su responsabilidad. Haba que reintegrarlas al hogar
que era suyo, sea en Euskadi como apuntaban sus esperanzas, o en Amrica como le marcaba la
realidad. Por otra parte, su esposa Mercedes le va a dar dos hijos varones, Joseba Bingen y Xabier
Iaki, a quienes Ametzaga acoge con el amor y el entusiasmo propio que todo padre recibe a los
varones. Mercedes perder tres nios ms, lo que lamentar siempre. Esta fecundidad de
Mercedes a tan tarda edad, aosa en trminos mdicos, aadida a complicaciones de salud tanto
de su esposa como suyas propias, aceleran la preocupacin de una economa mnima de
sobrevivencia.
En eso, como en todo, Ametzaga fuerza sus energas al lmite. Tanto en Buenos Aires en que
logran independizarse prontamente alquilando un minsculo apartamento, como en Montevideo
donde vivimos en las calles Juan Paulier 48, y ms tarde en Francisco Araucho 35, fueron
viviendas honorables. En Caracas, Venezuela, pudo Ametzaga acceder a la compra de un
apartamento que fue su vivienda definitiva, Residencias Country. Nombro este aspecto de su vida,
para alumbrar el extraordinario esfuerzo que signific su obra de escritor, traductor y periodista.
Doy fe que jams gan un centavo con su pluma. Lo hizo como contable en Buenos Aires, como
vendedor de seguros en Montevideo, como secretario, y ms tarde archivero en Venezuela. Pero
de cuanto public sean libros, sean artculos, sean traducciones, Ametzaga no percibi un solo
centavo. Y todo ello se elabor al margen de su actividad econmica y del cuidado amoroso que
mantuvo
sobre
su
familia.
No digo que esto sea un ejemplo a seguir. Solamente sealo que esta fue su verdad. Posiblemente
considerara que su obra, producida de tal manera, poda en primer lugar ser manifestacin libre
de su pensamiento y sentimientos. En segundo lugar, la defensa de Euskadi y de su lengua
nacional, para l, no tenan precio.
139
Nunca explic Ametzaga cundo descubri su capacidad oratoria. Esa facilidad con que conectaba
con el pblico, y esa soltura con que expresaba sus sentimientos e ideas. Lo cierto es que,
siguiendo su biografa a travs de sus escritos, lo vemos actuar por primera vez en pblico en el
Teatro Alvear de Buenos Aires, y seguidamente en el acto inaugural de la Gran Semana Vasca de
Montevideo, en una plaza, al pie de la estatua de bronce de Bruno Mauricio de Zabala, fundador
de la ciudad de Montevideo en 1627. No es fcil hablar en plaza pblica, de pie, ante una
muchedumbre cuya atencin puede estar fijada en todo lo que a su alrededor gravita. Hay que
alzar extremadamente la voz, saber articular los gestos, y sobre todas las cosas, mantener la
atencin, tan fcilmente dispersa, fija en uno mismo. En las palabras que se van pronunciando.
Esto lo logra Ametzaga con mucha facilidad.
El aspecto de la oracin fnebre fue distinto. Dentro del catolicismo de nuestro siglo es algo de lo
que se encarga el sacerdote durante la homila sacramental. La familia, los amigos, escuchan.
Asienten. Comprenden. Si en la antigedad tenemos ejemplos de estas exposiciones, quiz en
nuestra cultura europea no las haya ms clebres que las pronunciadas por Jacob B. Bossuet.
Ametzaga era atento lector de las mismas, aunque no lleg a traducir ninguna, pero pienso que
extrajo parte de la elegancia, emocin y lirismo, dentro de la gravedad clsica, tan francesas, que
aquel hombre del siglo XVII hizo clebres. Al menos, puedo recordarlo as, en el cernenterio del
Buceo, en Montevideo, trajeado de oscuro, con aquellos cuellos de almidn duros como cartn,
con el sombrero, que us esa generacin, en la mano. Acompabamos el fretro hasta los
nichos, y all, antes de reintegrarlo a la eternidad, Ametzaga pronunciaba su discurso. Altos pinos
rodeaban el cementerio, altos y oscuros. La paz de la ciudad de los muertos era profunda. A lo
lejos, el lomo marrn del Paran-Guazu, ro grande como mar en su advocacin india. El desfile de
sentimientos, emociones, y ternuras nos conmovan como rfagas de viento. Pareca, al
pronunciar tal exordio de un amigo, que dejbamos al muerto menos solo. Sin esa soledad
aterradora de la que se queja Garca Lorca: "Dios mo! Qu solos se quedan los muertos..."
140
Caracas, por el querido compatriota Jos Eli-zalde. M padre las rescat definitivamente del olvido
y la dispersin unindolas en forma de captulos, en su obra "El Hombre Vasco", publicado en Ekin
en 1967.
Es tambin en Montevideo, y posiblemente al ritmo de una sociedad con vida democrtica plena
como era la uruguaya entonces, donde Ame-zaga descubre su vocacin de periodista. De la frase
del padre fundador de la nacionalidad, Jos Gervasio Artigas (descendiente de navarros), "Con
Libertad ni ofendo ni temo", su cooperador ms estrecho, Dmaso Larra-aga (de clara
ascendencia vasca tambin) acua otra: "Sean los orientales tan ilustrados como valientes". La
potencia espiritual de la gesta libertaria, mantenida por hombres con caudal intelectual muy
desarrollado, lograba que el Uruguay fuese en aquel tiempo denominado, y con justa razn, la
Suiza de Amrica, tanto por sus gobiernos democrticos como por su prensa libre, ajena a toda
censura. Esta prensa libre que bien expresa Jos Enrique Rod, autor de "Ariel": ..."escribir la
historia de nuestra prensa sera escribir la historia borrascosa, pero noble y viril, de nuestros
esfuerzos por alcanzar la definitiva organizacin de nuestra democracia".
La prensa como soporte de la democracia era ya una realidad, un logro ms de la sociedad civil.
Vale afirmar este concepto porque indudablemente es uno de los que ms ha avanzado hasta
nuestros das, en los que ni podemos imaginar la sociedad democrtica sin los medios de
comunicacin.
En el pas donde bate sus alas el espritu de Ariel, por aquellos aos cincuenta del siglo, Ametzaga
va publicando sus artculos en los prestigiosos peridicos nacionales: El Plata (vespertino) y el Da.
Tiene audiencia segura, y sus escritos se van sucediendo con rapidez. Pocas veces, casi ninguna
puede decirse, se aparta del tema crucial de su vida, excepto quiz y lo roza, cuando se dedica a
informar de las jornadas que la Unesco sostuvo en Montevideo, que merecen consideracin
aparte1*.
EUZKO DEYA DE BUENOS AIRES. EUZKO DEVA DE MXICO. LA REVISTA DEL EUZKAL
ERRIA. BOLETN DEL INSTITUTO AMERICANO DE ESTUDIOS VASCOS DE BUENOS AIRES.
Al tiempo que ejerce esta actividad del periodismo polmico, Ametzaga se dedica a la escritura de
artculos ms densos, con inters prioritario en lo cultural, para las publicaciones que los vascos
del exilio mantienen en la sede de sus Centros Vascos. Esta es otra singularidad del exilio. Cada
uno de los Centros Vascos mantiene un peridico, una revista, un boletn, con el fin de exponer la
causa vasca a sus propios socios o para mantenerlos informados de sus actividades. El ms
importante y ms perdurable en el gnero cultural-di vulgativo quiz fuera La Baskonia del Laurak
Bat, pero no queremos exponernos a juicios de valor precipitados pues consideramos que la
produccin de estas publicaciones peridicas sera asunto de una investigacin propia. El Gobierno
Vasco en Exilio edita un boletn OPE EPI, y ms tarde una Revista, Euzkadi. Pero los Eusko Deya
de Mxico y Buenos Aires por ese tiempo son los ms vigorosos, alcanzando divulgacin
extendida. En ellos escribe Ametzaga. En varias oportunidades, repite la edicin de un artculo en
una de las revistas y en la prensa. O, y este es el denominador comn, las editoriales de las
revistas los asumen por considerarlos de inters. Sola recibir con bastante extraeza estos
artculos, reeditados sin su consentimiento (aunque no hubiese dudado en otorgarlo) y a la
141
As, muchas de las familias continan separadas y el regreso se aplaza para "la navidad
siguiente", frase que inmortalizar el optimismo del le-hendakari Jos Antonio de Aguirre. En el
ao que finaliza la Guerra Mundial, 1945, Ametzaga recibe dos grandes emociones
contradictorias: nace su primer hijo varn al que bautiza con su nombre en euskera, Bingen, y
muere su madre, Mara Aresti. El estrecho vnculo con la tierra vasca parece debilitarse por
fuerzas exteriores, pero l no desmaya en su propsito de retorno ni de lucha. No s si Ametzaga
se permite alguna depresin por entonces. En sus escritos no hay rastro de ella. Se reflejan otras
emociones en las que se mantiene siempre la resistencia en el Ideal y la perseverancia en la
accin. Para su madre en su poesa ntima tiene tiernas evocaciones.
En 1954 la Unesco elige como sede de su VII Conferencia a Montevideo, y Ametzaga es nombrado
delegado en la misma por el Ministerio de Instruccin Pblica de la Repblica del Uruguay. Fueron
jornadas intensas donde se debaten los temas de la Prensa, la Libertad, la Cultura de los pueblos,
"... sugiriendo mtodos educativos convenientes para preparar a los nios del mundo entero a las
responsabilidades del hombre libre''. Ametzaga, en la prensa, hace de corresponsal de las noticias
ocurridas en las Jornadas y, sobre todo, del espritu que las alienta. En su artculo "Uruguay y la
Unesco" ofrece una panormica acertada y emocionada de la inauguracin, aunque al final el
desaliento le cabe en unas lneas. Tanta democracia cabe en el Uruguay, tan resplandeciente que
daa a los ojos, y tan negra oscuridad, que daa a los ojos del alma, para su tierra natal. Esta
expresin siempre le acompaa en sus artculos de tema general, y la recuerdo en sus ojos
cuando bamos al hermoso edificio del Palacio Legislativo de la Repblica, todo de mrmol blanco
uruguayo. "Este es el palacio de las leyes de una repblica sana y democrtica. Aqu se respeta y
se trabaja por la felicidad del pueblo. Feliz Uruguay qu cosa tan grande tiene!".
En esos aos preciso es anotar que hubo dos temas esenciales en la oratoria y en la pluma de
Ametzaga. El bombardeo de Gernika habia sacudido la sensibilidad mundial. Franco intent tapar
la accin execrable con una mentira an mayor: los vascos destruyeron su propia villa santa de
142
las libertades. Como tantas mentiras, hoy resulta absurda. Pero Ametzaga y su generacin hubo
de defenderse de tal argumento propagado desde las activas Embajadas de Espaa en los paises
democrticos. Ametzaga se ocup de esta reivindicacin del honor vasco, repetidamente. La
plantacin de retoos del Roble de Gernika, tan abundante en su vida, era el gesto fsico de aquel
permanente reclamo.
Por otra parte el asunto de los fueros remova la memoria de los hijos de los antiguos deportados
vascos, los de la ltima guerra carlista. Es curioso encontrar en los artculos y conferencias de
aquel tiempo, aos 1943 al 60, prrafos laudatorios a Zumalakarregi, hoy todava nombre
prohibido en el pas, y por otra parte, la romntica evocacin del rbol de Gernika era fcilmente
asimilada por aquellos vascos que vieron a Iparraguirre o supieron de l, con su guitarra de
bertsolari o payador, por las pampas del sur, entonando el himno de la libertad vasca. Un poeta
argentino, dedica a un vasco, y en l a todos, sus inmortales versos:
Lo saludo en el pueblo que toda gloria explica;
Lo saludo en el vastago del rbol de Gernika;
Lo saludo en el Fuero de la honra y equidad
Pedro de Embeita "EL VASCO"! VIVA LA LIBERTAD!.
El 1952 publica Ametzaga su "Hamlet". Es su primera traduccin que conoce la luz en el mundo
editorial.
Lo
publica
Ekin
de
Buenos
Aires.
Es verdad que Hamlet es el hombre de la duda, y Ametzaga fue hombre de afirmacin, pero cierto
es adems que es la obra fundamental de Shakespeare. As, que el poderla verter al idioma vasco
le caus enorme y profunda satisfaccin. Recibe una elogiosa crtica de Orixe (Nicols Ormaetxea)
en un trabajo que envi y se public en la revista Euskal Erria de Montevideo.
Esta obra sale a la luz cuando la joven reina Isabel II va a ser coronada en Londres. Se
encuaderna primorosamente la edicin y se enva a la Embajada del Gobierno de su Graciosa
Majestad, la cual agradece el regalo, que es depositado en la Biblioteca Conmemorativa de
Shakespeare en Strafford-on-Avon, en calidad de Real Prstamo, y completando la ingente
coleccin de ediciones que en todas las lenguas ha conocido "Hamlet". Al fin, el euskera estaba
all,
entre
todas.
Esa
era
la
ilusin
y
el
orgullo
de
Ametzaga
.
Un ao despus se publica "Platero tabiok" en una edicin uruguaya subvencionada por Gonzlez
Mendilarzu quien adems la disea. Esta traduccin, al decir de Ametzaga, no ser del agrado de
Orixe pero no por el euskera o el tratamiento, sino a causa del tema.
Los detalles bibliogrficos de ambas obras pueden observarse en los ndices que acompaan esta
publicacin.
Ametzaga abandona el Uruguay en 1955, abril, con el corazn roto. En un artculo (aqu incluido)
se despide de la tierra en la que por trece venturosos aos pudo levantar una familia,
reorganizarla, y combatir por su causa con dignidad. La repblica uruguaya se haba alistado en
143
las filas aliadas desde el principio de la Guerra Mundial, de manera decisiva despus del ataque de
Pearl Habor, y en 1945 habia incluso declarado la guerra a Alemania. No se poda olvidar el
combate del "Graf Spee" acorazado alemn, con un barco ingls, en Punta del Este, cobijndose el
buque alemn en la baha de Montevideo y cuyos restos pudimos contemplar en los das de
nuestra niez, oxidados y catastrficos, testimonio de la crueldad de la guerra.
..."Esto es como un desgarrn en el alma; una tristeza muy honda en la que pareciera furamos a
hundirnos sin encontrar el fin jams", se lamenta en principio y, considerando luego los beneficios
de la democracia uruguaya, reafirma la condicin por la que arrib a sus costas: "... llegamos
como lo que somos, sin tapujos ni disfraces: hombres de Cristo, vascos y demcratas. Y para
nosotros se abrieron siempre todos los brazos..." y contina: "... en la Universidad, en el Instituto
de Estudios Superiores, y en el Ministerio de Instruccin. Y pulsamos la vida oriental en el
Parlamento, en la Academia de Las Letras, en el Ateneo, en la calle, en las tribunas populares, en
las redacciones de los diarios...; la suerte nos depar vinculaciones que revalorizaron nuestra
vida, dieron nuevos impulsos a nuestros afanes, y alumbraron vas nuevas a nuestras ideas y
sentimientos ... Adis Uruguay. Sea lo que sea que la vida depare, no podr dejar de amarte
jams".
Esta fue su declaracin de amor. Y fue tambin su verdad. Uruguay se nombr siempre en sus
labios con el gusto de la miel. Tom el avin de motor de hlice en el aerdromo de Carrasco. Lo
llev su mejor amigo, un hombre de Algorta, Pedro Artetxe. Vol por los limpios y celestes cielos
uruguayos, sobre las praderas de hierba verde, sobre las suaves cuchillas de su interior y los ros
del sur, cruzando el Mato Crosso, y sobrevol los lomos inmensos del Amazonas y del Orinoco.
Catorce horas despus aterrizaba en el Aeropuerto Internacional de Maiquetia, en Venezuela.
Dejaba atrs un mundo entero que no tardara en sumirse en una profunda crisis poltica y social.
A l le gustaba, al evocar el tiempo de Uruguay, repetir los versos de Zorrilla en el "Tabar":
"El Uruguay y el Plata
Vivan su salvaje primavera;
La sonrisa de Dios, de que nacieron,
an palpita en las aguas y en las selvas;
An viste el espinillo
su amarillo tipoy; an en la yerba
engendra los vapores temblorosos,
Y a la calandria en el omb despierta
Es la raza indomable,
Que alent en esta tierra,
Patria de los amores y las glorias,
Que al Uruguay y al Plata se recuesta;
La patria cuyo nombre es cancin en el arpa del poeta, grito en el corazn, luz en la aurora. Fuego
en la vida, y en el cielo estrella".
LA TIERRA DE GRACIA.- VENEZUELA.- Aos 1955-1969
144
En principio trabaja con un familiar, Giuseppe Bartolomedi, esposo de su sobrina Mara Luisa
Urquijo, a quien como a todos sus sobrinos distingue con un afecto vivo y especial, a modo de
contable y hombre de confianza. El repetira siempre que aunque nada pareca ms ajeno a su
naturaleza que su ttulo de Perito Mercantil, fueron muchas las veces a lo largo de su vida que le
vali ms esta titulacin que la de su carrera formal de abogado.
Su hija Begoa ha de seguir en ese sentido sus pasos y adquiere la misma titulacin. Pero al da
siguiente de llegar a Venezuela (tal como lo hizo en Argentina y Uruguay) se presenta en el
Centro Vasco, reclamado por Jos Mara Lasarte. El Centro Vasco de Caracas tiene una
peculiaridad. Carece de las viejas raices del Laurak Bat o del Euzkal Erria de Montevideo, fundado
por los vascos en la Deportacin Carlista. En Caracas los vascos llevaban 20 aos y provenan en
su mayora del Exilio del 36. Ametzaga reconoce a los viejos amigos de Eus-kadi: Jos Mara
Lasarte, Lucio Aretxabaleta, Fernando Carranza, Manuel Lartitegui, Luis Bilbao. Con alguno de
ellos realiz su viaje en el Alsina. Al poco entra a formar parte, a medio tiempo, de la secretara
del mismo.
Lo tenemos en 1956 publicando sus primeros artculos en Venezuela, en las revistas que ya
editaban las diversas organizaciones del Centro Vasco, y confeccionando la Revista
Conmemorativa del XXV Aniversario de la llegada de los vascos a Venezuela. Consigue los
artculos, enlaza los temas, se procura las fotos, y prcticamente enmaqueta el material,
consiguiendo la propaganda que subvenciona la revista. Volver a repetir este trabajo dos veces
ms. Es interesante anotar este hecho pues volvemos a incidir en sus facetas de organizador nato
y hombre activo, que combina siempre con sus realizaciones literarias.
Publica (ver el ndice de esos aos) material abundante y siempre trajinando el tema vasco. Pero
a Ametzaga le va a suceder algo muy importante en Venezuela que marcar definitivamente el
rumbo de su vida y procurar a su produccin literaria un matiz nuevo. Ametzaga encuentra la
Compaa Guipuzcoana de Caracas, la empresa vasca del siglo XVIII. Esto merece consideracin
especial.
145
Creo que nada es ms importante en sus aos de Venezuela que este contacto histrico que, por
casualidad, descubre Ametzaga . Por una serie de contactos oportunos y una serie de
circunstancias poco afortunadas, Ametzaga abandona la Secretaria del Centro Vasco de Caracas,
los negocios de su familia, y entra a trabajar en el Archivo de la Nacin de Venezuela, pero lo que
es ms importante, a mi juicio, entra a trabajar en la Fundacin John Boulton, y entabla
conocimiento que se traduce en amistad sincera y profunda con dos grandes investigadores
histricos de Venezuela, ambos hoy Acadmicos de la Historia, Miembros de la Sociedad
Bolvariana, catalanes de origen, venezolanos de adopcin: don Pedro Grases y don Manuel Prez
Vila'. A travs de ellos, contacta con el Director de la Fundacin Boulton, don Alfredo Boulton.
(Alfredo Boulton, Premio Nacional de Literatura en Venezuela, miembro de las Academias citadas,
y como Pedro Grases y Manuel Prez Vila, autor de una prfusa obra bibliogrfica).
En 1958 cae el dictador Prez Jimnez. Venezuela, al comps de su cancin nacional "Gloria al
Bravo Pueblo", sacude por una revolucionaria accin de todas sus fuerzas sociales, no tan solo a la
dictadura militar, sino a una etapa que desde la Independencia le ha restado democracia, libertad
y bienestar social. Los aos de iniciacin democrtica en Venezuela son formidables en todos los
sentidos. Pero Venezuela, dispuesta a forjar su destino democrtico, quiere forjar tambin su
tiempo histrico. Se abren los archivos, se revitalizan las bibliotecas, (incluso se inaugura en la
Universidad, al modo de la educacin sajona, la carrera de Biblioteconoma y Archivos, con rango
de Licenciatura, propiciada por la doctora Blanca Alvarez, ms tarde Directora de la Biblioteca
Nacional, y de la cual fui alum-na y empleada, y a la que acced por empuje de mis padres), y en
definitiva, se lanzan a la apasionante aventura de escribir su propia historia. De hacerla
trascendente. S en Uruguay, Ametzaga se involucr al periodismo democrtico, que afirmaba el
espritu de Ariel, en Venezuela su espritu curioso se acerca a las fuentes de la historia, al honroso
quehacer nacional.
La Tierra de Gracia, como bautiza Coln en los dias del Descubrimiento a Venezuela, vierte sobre
Ametzaga esa condicin primigenia, esa gracia original, esa tempestuosa fuerza natural del primer
da del mundo. Y con ella lo bendice. Porque bendicin fue y grande el encuentro de Ametzaga y la
Compaa Guipuzcoana, y aqu, en esta ltima etapa de su exilio y de su vida, Ametzaga se
conforma, gracias a este encuentro espiritual e histrico, con una condicin para l nueva y que
tarda en comprender: Ya no es tan solo vasco. Desde la Guipuzcoana, es un hombre universal, al
ser un hombre americano.
En esto, Ametzaga merece su parangn con Jess de Galndez7, aunque ste ltimo llevara su
condicin hasta el martirio. En numerosos artculos y en una preciosa conferencia, Ametzaga,
fielmente, llora y reclama por la vida de su amigo mrtir. Y es que en esto vale destacar la
extremada generosidad que despliega Ametzaga en el halago y comprensin de las virtudes
ajenas, en la exposicin de las mismas, en el abundante trabajo de investigacin que sobre ellas
establece, para desplegarlas con toda amplitud ante su pblico. S que Galndez, con quien
mantena una correspondencia activa, fue llorado por Ametzaga que advirti desde el principio
toda la tortura a la que fue sometido hasta finalmente acabar con l. Pero no con su espritu,
repeta Ametzaga , "nunca acabarn con el espritu de hombres como Jess de Galndez, capaces
146
de dar su vida por la libertad de los Sobre Jess de Galmdez, para su conocimiento, recomiendo el
estupendo libro de Alberto Elbegui, "Galndei". dems hombres. Sean vascos o dominicanos,
porque lo que importa es que son hombres".
En el siglo XVIII, impulsados por el Espritu de las Luces, el Espritu de la Ilustracin y por la
Sociedad de Caballeritos de Askoitia (una sociedad ilustrada), se crea la Compaa Guipuzcoana
de Caracas. Es un consorcio adaptado ya a las nuevas formas mercantiles, ms libres, y una
estupenda realizacin del genio vasco. La Compaa agrupa a gente de todos los pueblos vascos,
y comienza su andadura desde el Puerto de Pasajes, con la finalidad de expulsar a los piratas del
Caribe, hacer produccin de algodn, azcar y cacao en una tierra pobre del Imperio Espaol:
Venezuela. No es cuestin de anotar aqu la historia de la Compaa, para eso bastan los libros de
Ametzaga, sus artculos. Solamente reseo un hecho histrico vasco que haba quedado muy
olvidado en la historiografa venezolana. Un pequeo libro de Basterra, "Navios de la Ilustracin",
y algunas menciones en autores venezolanos. En Euskadi, el olvido total. Y sin embargo, la
Compaa introdujo las ideas ilustradas en Venezuela y propici el impulso independentista, es
decir, el de la Libertad. Cultiv las extensas sabanas salvajes del centro de Venezuela y las
convirti en frtiles plantaciones de azcar, ail y cacao.
Convulsion la sociedad a tal punto que hubo un levantamiento contra ella y su poder. Despej el
Caribe de piratas y enriqueci, con el auspiciamiento de astilleros, la economa vasca del siglo
XVIII. Todas estas cosas esperaban estudio y atencin. Ametzaga fue el encargado de hacerlo.
Puerto Cabello donde la Compaa haba eregido una casa (semejante a la de La Guaira, su
principal factora, y al estilo de los caseros del pas vasco) alli estaban los cajones de madera de
cedro en los que durante doscientos aos permanecieron guardados los papeles de la Compaa.
Lacrados, amontonados y cerrados con cuerdas. Datos, cartas comerciales, facturaciones, detalle
del movimiento de los barcos corsarios, de la vida y hechos de algunos de sus capitanes. La
detallada lista de la marinera. Haba que ordenar el material, cierto es, y desenredar, como una
madeja, el dorado hilo de la historia. Esa fue la enorme reparacin que Venezuela concedi a
Ametzaga por su Exilio. Y el amor de Ametzaga por Venezuela se hizo fuerte y agradecido a partir
de tal encuentro.
147
Su obra es publicada por el Banco Central de Venezuela. Su nombre es cita obligada desde
entonces, para quienes trabajen el s. XVIII venezolano que, desde Ametzaga, tiene nombre de
Compaa Guipuzcoana.
Pero no descuida sus fatigas vascas. Sigue escribiendo temas culturales y polticos en los diversos
boletines y revistas del Centro Vasco de Caracas, y en revistas de Venezuela. En sus peridicos
ms afamados, El Nacional y El Universal. Establece polmica con Salvador de Madariaga seguida
con enorme inters, ya que Madariaga es hombre deshechado de la cultura venezolana por una
biografa de Bolvar que no fue de gusto nacional. Da conferencias en el Centro Vasco de Caracas,
en el Centro Gallego siguiendo el hilo de la vieja idea de Galeuzka que naci en Buenos Aires y
que l impuls en Montevideo.y publica en 1967 El Hombre Vasco
El Hombre Vasco es una recopilacin de todas las conferencias que imparti sobre cultura vasca a
lo largo de su vida. El espritu de Plutarco alienta sobre l. A travs de los hombres geniales,
acierta en la historia de los vascos. Quien quiera adentrarse en las profundidades de nuestro
pueblo, bucear en nuestros arcanos histricos, pero de un modo grato y sencillo, debe leer El
Hombre Vasco.
En fecha 01-2010, se crea la Pagina Web que lleva el nombre de su Aita: Vicente de Ametzaga
Aresti y en la cual su hijo menor, Xabier Iaki Ametzaga, presenta la vida de Vicente de Ametzaga
Aresti, y toda su obra publicada, convirtindose en el unico sitio de referencia, en cuyo contenido,
se encuentra a disposicin Internacional, con una ilimitada difusin potencial, toda la Obra
publicada, y su Biografia
Tras un unico trabajo de Recopilacin, Edicin y Publicacin electrnica de toda la Obra publicada,
y su Biografia, se da vida a la pagina web, siendo perse, el sitio de referencia a la Obra y Vida de
Vicente de Ametzaga Aresti
En 01-2011, se funda la Editorial Xamezaga, en cuyo seno, se presenta a traves de el catalogo de
Obras, toda la Obra publicada, y su Biografia, dicha Editorial es de caracter electrnica, en
Internet.
Ambos hechos, la Pag Web, y la Editorial electrnica, constituyen un unico homenaje por parte de
su hijo menor, Xabier Iaki Ametzaga, en nombre de la familia, para la mayor difusin de la vida
y obra de nuestro padre.
Pagina Web que lleva su Nombre su obra y biografia
http://vicenteAmetzagaaresti.blogspot.com
Editorial Xamezaga Catalogo de Obras (504) toda su obra y biografia
http://editorialxamezaga.blogspot.com
Enlace http://www.scribd.com/xamezaga
148
Capitulo 13.
149
Naci en Algorta el cuatro de julio de 1901 en la casa solariega de Iturrieiu1, situada en la avenida
Basagoiti n." 75. Su padre, Pedro Amezaga Abaroa (1852-1919) era un rico industrial y abogado
de Algorta, primognito de la larga saga de los Amezaga, enclavada en Getxo desde al menos el
siglo XVI. Su madre, Mara Aresti Sustatxa (1862-1945), haba contrado matrimonio con Pedro
tras quedar ste viudo de su primera esposa, Rosa Aresti Sustatxa, hermana mayor de Mara 2. Era
asimismo Mara miembro de una familia acomodada y fijada en Getxo desde tiempo inmemorial.
El tronco de los Aresti de Algorta -coment siempre Vicente-lo vinculaba, si bien por lazos lejanos,
con Gabriel Aresti, el poeta de la margen industrial del Nervin, al cual admiraba.
Era Vicente de Pal Laureano el menor de siete hermanos. Su juventud transcurri con plena
normalidad, aficionado a la pelota, pasaba horas jugando en el frontn de la iglesia de San Nicols
de Algorta. Acompaaba el joven Vicente -en su calidad de encargado de la ropa deportiva del
Arenas Club de Ftbol-, a su hermano Ramn, delantero de dicho equipo, en los campos de
Joiaxeta, Padura y muchos otros. Este once getxotarra subira a primera categora en 1913,
logrando conquistar el Campeonato del Estado3. Estudi en el colegio San Bernardo de
La casa de llmela de Zubiaga habia pertenecido a la familia desde al menos mediados de siglo
XIX.
J
150
Gerardo Eduardo de Aburto, en 1918 ejerca el cargo de Jefe de Fomento de la localidad. Escritor
muy prolifico, cuenta con al menos un total de cincuenta obras de teatro adems de innumerables
artculos, semblanzas y poemas que publicaba en la prensa local y regional bajo los seudnimos
de Gizulili y Ramn de liutrieta. Director del Cuadro Dramtico de Getxo, grupo que alcanzara
mucho relieve en la vida del pas, representara sus obras en el Gran Cinema de Getxo asi como
en Portugalete, Erandio y el Olimpia de Bilbao. Por lo que respecta a su vida deportiva, fue
consignado como el mejor delantero de Vizcaya en la Caceta del Norte; ante el ofrecimiento del
delegado del Club Atliletic de ingresar en sus filas Amezaga se neg, pues unos das antes un
profesor nos asegur que Algorta seria anexionado por Bilbao y ello me produjo un gran disgusto.
En 1936 se encuentra junto a sus hermanos Manuel y Vicente en el exilio de Donibane Garazi.
Fuente, revista Galea,n. 163,Getxo, noviembre,2*quincena, 1992,
4
Revista de cuya direccin formaba parte Arturo Campin, editada ntegramente en euskera.
Ms adelante fundador y director, junto a Pello Irujo Olio, de Tierra Vasca, publicacin de Accin
Nacionalista Vasca, partido del que fue activo terico.gestiones que con ms agrado -no exenlo de
cierto humor- recordara siempre Amezaga sera la celebracin del matrimonio civil de su amigo
Jos Antonio con MariZabalaen 1933.
La designacin de Amezaga como Juez de Paz fue hecha por libre eleccin del vecindario segn se
haba ordenado, con carcter general, para las poblaciones no cabezas de partido judicial y con
menos de 12.000 habitantes en virtud del decreto de 8 de mayo de 931 del Gobierno provisional
de a Repblica. (...) Un juez municipal es un depositario de todas las cosas que las buenas
gentes desearan no fueran conocidas a nadie: las rencillas entre vecinos, los desrdenes y
agresiones de pequea importancia, de todo cuanto parece mnimo, pero en resumen es lo que
puede hacer desmerecer en el concepto de as gentes. Evidentemente, Vicente Amezaga haba
merecido la confianza del vecindario de Getxo como hombre prudente, reservado, responsable, de
confianza*.
Entre 1920 y 1936 se forma abundantemente en las materias que van a ser el eje de su vida
intelectual desde el inicio de la Guerra Civil hasta su muerte, muy lejos de su Algorta natal.
Durante stos sus nicos aos de relativo sosiego espiritual y comodidad material, Vicente
aprende a dominar ocho lenguas 9 y adquiere una formacin muy completa en historia y cultura
vascas, de lo cual son sobrado testigo sus innumerables conferencias 10, artculos periodsticos11,
traducciones y sus diez libros, cinco de los cuales han sido publicados12. En 1933 conjuga el ejer8
Domina en 1921, a los veinte aos de edad, castellano, ingls, francs y cuskera. Entre 1921 y
1936 perfecciona los conocimientos de latn y griego clsico asi como de italiano y alemn,
lenguas todas desde las que verter a) euskera una extensa cantidad de obras, preferentemente
poticas.
10
La mayor parte de sus conferencias estn recogidas en su obra El Hombre Vasco, Ekin, Buenos
Aires, 1963.
1'
Los artculos periodsticos de Vicente Amezaga Aresti estn publicados en los dos volmenes de
Nostalgia, publicados por Ed. J.A. Ascunce, Donostia, 1993.
12
151
de una coleccin de doce) recogen tres de sus obras, El Hombre Vasco, Hombres de la Compaa
Guipuzcoana y El Elemento Vasco en el Siglo XYIII Venezolano, obras todas publicadas con
anterioridad. Adems de estos ttulos estn publicados Jess Muoz Tebar, (junto a E. Pardo
Stolk), Fundacin Eugenio Mendoza, Caracas, 1959 y Vcente Antonio de caza, Comndante de
Cursarios, Ediciones del Cuatricentenario de Caracas, Caracas, 1966. Completan estas obras de
carcter histrico un diccionario de modismos y las obras de carcter potico. Santiago Onaindia
recoge en su obra Milla Euskal-Olerlti Eder (1954) una pequea muestra de la obra potica en
euskera de Amezaga, uno de los pocos vestigios de la poesa del autor anterior a 1937.
compartia la abogaca con la enseanza impartiendo clases como profesor de Historia y Literatura
en el Instituto de Segunda Enseanza de Oetxo. En 1935 es propuesto por Resurreccin M." de
Azcue para una beca de investigacin lingistica en Alemania, no obstante, sus obligaciones en
Algorta truncan este proyecto. Ese mismo ao organiza junto a otros euskalzales de Getxo el
Euskararen Egtina al que invitan al bertsolari Pedro de Enbeita, quiz una de sus ltimas
intervenciones pblicas fuera en un Da del Euskera que el que os habla, junto con otros queridos
amigos y entusiastas euskaltzales, organizamos en nuestro pueblo natal de Getxo el ao anterior
al estallido de la guerra. Tengo bien presente mi visita a Mundaka, aquella casa donde se
albergaba gracias a la generosidad vasco-argentina el bardo de Euzkadi. En una verde loma, no
lejos de a carretera de Muxika a Zugaztieta se alza el casero. A sus puertas fuimos recibidos por
Enbeita con el grave cario que le era habitual. Mientras paladebamos el sabroso txakoli con que
seorialmente nos obsequi, conversamos largamente con Kepa a quien sus hijos rodeaban y le
expusimos nuestra pretensin de que concurriera al festival proyectado. Prometi, en gracia a!
objeto de la fiesta y a nuestra amistad, concurrir con sus hijos Sabin y Salendin que seguan ya
airosamente las huellas de su padre y que cantaran en el certamen; l, por su parte,
improvisara un par de coplas. Mas no podra; bien quisiera, pero no podra. Y nos confes con
amargura su tragedia sobre a que pueden reflexionar los aficionados a estudiar los misteriosos
nexos que entre lo fsico y lo espiritual existen: al quebrrsele la voz en la garganta -nos deca-,
simultneamente, el etorri, la inspiracin quedaba cortada en su cerebro. Tuve entonces la mala
ocurrencia de decirle que poda preparar unas cuantas estrofas, tomrselas de memoria y
recitarlas en el festival. "Preparar, escribir? -me dijo-. Una sola vez lo he intentado, para el
Congreso de Estudios Vascos de Vitoria, en mi empeo de hacerlo mejor. En mala hora! Se me
arm tal confusin en la cabeza que no s cmo pude salir del paso. No: lo mo tiene que ser lo
del momento; sin preparar. En los temas claro que pienso y mucho; pero la forma de decir, el
verso, eso tiene que ser lo que me sale en el momenton.
Tras el estallido de la guerra, es nombrado Director General de Primera Enseanza del Gobierno
de Euskadi en virtud de la orden expedida por Jess M." Leizaola, por entonces Consejero de
Justicia y Cultura, el 12 de noviembre de 1936 14. Sobre este aspecto de su vida comentar
muchos aos despus, con motivo de la publicacin de los tres primeros tomos de sus obras
completas, el ya Lehendakari Leizaola que Amezaga ocup inicialmente el cargo de Director
General de Primera Enseanza precisamente por aquel inters demostrado en el
13
Vicente Amezaga Aresti, f Honiire Vasca, Ekin, Buenos Aires, 1967, pp. 272-273.
14
Diario Oficial de] Pas Vasco n." 13/36 de noviembre, 1936, p. 284.cultivo del euskera. He de
adarar -contina Leizaola- cuan otra era la preocupacin esencial a la que hubo de dar frente en
el ejercicio del mismo: tena entonces importancia superior an a la puramente cultural y nos era
comn a ambos, hallndose en primerisimo plano en aquellos das. (...) En las semanas
precedentes al nombramiento, la aviacin alemana, en auxilio de a sublevacin franquista, haba
procedido a unos bombardeos sobre Bilbao y Las Arenas^; en los bombardeos indiscriminados,
como fueron los mencionados, murieron 96 personas, entre las cuales 18 mujeres y nios.
Amezaga, en el ejercicio de su cargo de Director General d Primera Enseanza, tuvo, como yo
mismo, una primordial preocupacin: que las escuelas y los nios en edad escolar no cayesen
152
bajo las bombas de la aviacin enemiga. Puedo asegurar que el autor de las pginas que seguirn
(Vicente Amezaga) recorri Vizcaya entera en busca de posibles lugares de asilo para la poblacin
infantil y para sus educadores. Como tambin estimul y eligi lugares cuyos alcaldes vivieran
con esta primera y fundamental preocupacin. En ninguna de sus elecciones err y si hubo, luego,
nios victimas de la aviacin, nunca fueron en locales o grupos escolares. (...) Cuando hice su
nombramiento, sin que por su parte hubiera mediado solicitud alguna, se me present en el
despacho en una forma sorprendente por su discrecin muy marcada. No era retraimiento; su
miopa le daba un porte particular y propio de la inseguridad o prudencia con que hacen sus
movimientos quienes tienen dificultades en la visin. Lo que yo saba de l, aparte del amor y
cultivo de la lengua vasca, sobre todo en poesa, era su titulo de abogado y su condicin de juez
municipal de Getxo}6.
Escasos dias ms tarde de este su nombramiento, el 4 de diciembre, cursa la orden para la
creacin de la primera ikastola al amparo del Estatuto del treinta y seis. De hecho, la orden de
creacin de la Ikastola de Plencia corre paralela a la orden por la cual se facultaba a Vicente
Amezaga para todo lo relativo a la creacin y agregacin de escuelas, asi como para el
nombramiento de los maestros que han de regentar las mismas 17. En virtud de esta polestad se
crea la Ikaslola San Jos de Plencia, la cual ser regentada, con carcter inierino y, de acuerdo
con el ayuntamiento de la localidad, por Alejandro Rui? Ibez, Flix Dorronsoro
1 s
Cuenta Mercedes Iribarren Goroslegi, esposa de Amezaga, (an con vivido sobrecogimiento
cuando haban transcurrido 34 aos de aquello) el terror que producan los mensajes radiados de
Queipo de Llano hablando de los "bombones" que gustaba regalar a los vascos asi como que iban
a hacer las tropas con las mujeres y "sacerdotes" vascos que cayesen en sus manos. Fuente,
grabaciones magnetofnicas realizadas por Mercedes Iribarren durante los aos 1969 y 1970.
16
Diario Oficial del Pais Vasco n." 59/36 de diciembre, 1936, p. 469.
153
Urdampilleta e Isabel Larrakoetxea Gallaga, todos ellos maestros de primera enseanza. Esta
primera ikastola oficial del treinta y seis quedaba sujeta al Gobierno de Euskadi y a cargo del
presupuesto del Departamento de Justicia y Cultura del mismo gobierno. Paralelamente a la
fundacin de las ikastolas, emprende Vicente la labor de traduccin de libros de texto al euskera y
la creacin de las primeras escuelas para la formacin del profesorado. Se consumaba asi, en
plena guerra y con el frente en retroceso a no ms de 48 Kms de Bilbao, su gran SLo, el inicio,
aunque fugaz, de la recuperacin del euskera. La guerra truncara, en efecto, los esfuerzos del
Gobierno de Euskadi y la Ikastola de Plencia, como todas las dems, sera clausurada.
Ante la inminente cada de Bilbao, Amezaga hubo de afrontar la tarea de desmantelar estas
ikastolas y proceder a la evacuacin de los nios que, o bien haban perdido todo contacto con sus
familias, o bien eran familiares de personas perseguidas que tomaban el camino del exilio o
estaban en prisin. La evacuacin de estos nios exiga asimismo la apertura de rutas por mar
fundamentalmente hacia Inglaterra, Francia o la URSS y la paralela organizacin de colonias
donde estos nios serian acogidos. El personal docente de las colonias era voluntario en su
totalidad, el alistamiento del mismo se realizaba a travs del Departamento de Cultura, el cual,
mediante notas que se hacan pblicas en la prensa, invitaba a que "las maestras que aspiren a
marchar al extranjero y deseen ir como agregadas a las colonias de nios deben pasar a la mayor
brevedad por las oficinas de cultura bez de Bilbao, 22, afn de llenar la hoja correspondiente ".
Tras la inscripcin, el nombramiento lo realizaba el Departamento de Justicia y Cultura, con
afirma del Director de Primera Enseanza, Vicente Amezaga. En dicha notificacin se especificaba
el colectivo de nios asignado a cada maestro^*. Tal como cuenta Mercedes Iribarren, esposa de
Amezaga, el alistamiento de tos nios era asimismo voluntario y el envi de stos a la URSS
requera un permiso especial expedido por los padres o el tutor de los nios.
La toma de Bilbao descarga sobre Amezaga la pena de muerte y la orden de embargo de todos
sus bienes por ser uno de los causantes de la ruina de Vizcaya. Estaba Vicente el sexto en la lista
de los enemigos de Vizcaya condenados a muerte, de modo que la misma noche de emprender el
exilio, concretamente a las tres de la maana del 14 de junio de 1937 y sin ms testigos que el
sacristn y un joven monaguillo, contrae matrimonio con Mercedes Iribarren Gorostegi, hija
menor del industrial guipuzcoano radicado en Las Arenas, Inocencio Iribarren Egaa (1864-1943),
en la iglesia parroquial de Las Arenas19.
IB
Arantxa Beli Saez, "El exilio vasco: educacin-universidad", en La Cultura del Exilio Vasco, 2
vol., J.A. Ascunce, Donostia, 1994, vol. 2, p. 211.
19
154
Como Director General de Primera Enseanza se le encarga la direccin de la colonia de los 500
nios vascos de Donibane Garazi por lo que ha de emprender camino de Santander esa misma
noche. Habiendo dejado a salvo a su mujer junto a Juliana, hermana de esta ltima, en algn
lugar del camino entre Bilbao y Santander, regresa a Bilbao para ponerse en contacto con
Leizaola. En aquel momento caan sobre la capital vizcana los ltimos morteros antes de la
entrada de las tropas fascistas en la ciudad. Amezaga urgia a Leizaola a abandonar la sede del
Gobierno de Euskadi en el Hotel Garitn mientras estallaban las bombas a su alrededor sin que
ste ltimo demostrara la ms mnima agitacin. Abandonando finalmente Bilbao y atravesando el
rea ocupada por las tropas italianas entre la capital y Getxo, se despide all de su madre a quien
nunca ms volvera a ver. Quedaba as Mara Arest, a la edad de 75 aos, viuda y sola, en su casa
natal de Iturrieta. Aos despus sabra su hijo que Mara Aresti fue condenada a beber aceite de
ricino, rasurada y obligada a abandonar su casa y bienes por orden de la Comisin Central
Administradora de Bienes Incautados 20; su delito, ser madre de tres hijos exilados. A merced de
todo, una familia amiga de Getxo la acogi en su hogar y le brind la oportunidad de rehacer su
vida.
Ya en Santander la primera ocupacin de Amezaga era buscar un lugar para albergar a los 500
nios. Tras muchos atropellos logr instalar a aquellos nios, enfermeras, y dems personal que
llegaban un da ms tarde en tren desde Bilbao, en el Hotel Real de Santander, sobre la misma
lnea de playa. De este modo embarca Amezaga unos das ms tarde, el 22 de junio, haca
Donibane Lohitzune a bordo del Plus Varmet21 uno de los pocos buques que haciendo caso omiso
de la orden de Churchill de respetar el bloqueo de la costa vasco-cantbrica y, exponindose al
posible ataque de los cruceros Almirante Cervera y Canarias o del acorazado Espaa, rompe el
cerco y conduce a estos refugiados a su primer exilio hasta las costas de Iparralde.
2U
Si bien Mercedes Iribarren menciona el carbonero Plus Varmelen la grabacin de sus memorias,
en el pasaporte del Gobierno de Euskadi de Amezaga se lee la siguiente inscripcin, autorizado
para embarcara /el vapor "Poubozlancce" acom/panando a la colonia injonlil /de Euzkadi
155
A la salida del puerlo el Almirante Cervera les corta ei paso haciendo subir al capitn
el fin de comprobar la lista de pasajeros. Amezaga, Barandiaran y Grate, segn
Mercedes Iribarren, los nicos varones del grupo, hubieron de ocultarse en la
carbonero. El 24 de junio llegaban a Donibane Lohitzune desde donde tomaron el
Donibane Garazi llegando a la capital de la Baja Navarra ese mismo da por la noche.
a bordo con
el relato de
bodega del
ferrocarril a
Arantxa Beti Saez, "El exilio vasco: educacin-universidat", en La Cultura del Exilio Vasco, 2
vol,, J.A. Ascunce, Donostia, 1994. Vol.2, pg. 212.
J3
El Frente Popular de Len Blum impuls asimismo la formacin del Comit il'Accueil aux Enfanls
d 'Espagne. En Inglaterra y dirigido por Leah Manning se cre el Basque Children Com/nitiee.
156
157
los Urbano Aguirre, presidente del Comit Pro-Inmigracin Vasca. Esle comit ru formado en
virtud del decreto del presidente de la Repblica de Argentina, Sr. Ortiz Lizardi, facultando al
mismo para conceder ciudadana y derecho de ingreso en la repblica a cualquier ciudadano vasco
que, con o sin documentacin, ambara a las costas del Plata, Hay que hacer nolar que el
matrimonio Amezaga-Iribarren, como a muchos otros exilados se les haba retirado la ciudadana
espaola al entrar en vigor en febrero de 19391a Ley de Responsabilidad Politica, en virtud de la
cual las sanciones econmicas podran ir acompaadas de otras de distinto carcter, como por
ejemplo inhabilitacin para ejercer determinados cargos y alejamiento de os lugares de
residencia anterior, llegndose en derla casos de gravedad significada a la prdida de la
nacionalidad de los que no merecen seguir siendo espoliles. Ley de Responsabilidad Poltica,
Heraldo de Aragn, 28-2-1939 (En Fernando Daz-Plaja, La Guerra de Espaa en sus Documentos,
Plaza & Janes, Barcelona, 1975, p. 5% y ss.). De este modo tenan como nico documento de
naturaleza el pasaporte del Cobiemo de Euskadi, el cual guardarn celosamente hasta el final de
su vida. La generosidad del decreto de Ortiz Lizardi (que seria inmediatamente emulado por Juan
Jos Amezaga en el Uruguay) deberla ser tenida en cuenta por el actual gobierno del estado al
marcar las lineas maestras de la poltica en materia de inmigracin con los pases de Amrica,
pero es ste otro tema.
158
27
En Venezuela toman tierra gran cantidad de exilados vascos de ste y otros barcos.
;9
Escribir adems de ste oros cuatro libros de poemas, aunque desgraciadamente han llegado
a nosotros muy fragmentados. ngelus (1942-1944), Rincones Mgicos (1942-1944), ltimos
Poemas (1945-1958) y una pequea joya de la poesa y dialectologa vascas titulada Errimia
(1943-1968). Deja asimismo Amezaga una pequea obra en prosa potica sobre su GeUo natal
titulada Charlas de Axerrola (1943) y del eual hay un capitulo "Sinfona de Getxo" recientemente
publicado en Nostalgia, 2 vols., pp. 316-318, J.A. Ascunce, Donostia, 1993. En vida del autor fue
publicado este mismo capitulo en Euzko Deya, Mxico, 1946 y Euzko Gaztei, Caracas, 1957.
Asimismo ftie publicado otro captulo "Intermedio Sentimental" en Euzko Deya, Buenos Aires,
jimio 6, 1943.
159
exilio. A los ocho das de atracar en Buenos Aires se encuentra trabajando como contable en una
empresa alpargatera lo cual le iba a permitir un cierto respiro econmico. Antes de los dos
primeros meses de estancia en la capital argentina est inmerso en la creacin del Instituto
Americano de Estudios Vascos del cual es cofundador, proyecto del que haba tenido noticia
durante el largo viaje desde Marsella. Durante los meses de mayo a diciembre emprende el que
seria un extenso ciclo de conferencias que iba a recopilar ms tarde en una de sus obras ms
representativas, El Hombre Vasco, que vera la luz en 1967. Sobre el ciclo de conferencias
celebrado a peticin de Ramn M. a Aldasoro30 en el Euzko Txokoa y organizados por Accin Vasca
researa el comentarista de Euzko Deya, el sbado 24 y domingo 25 del pasado mes, numerosa
y distinguida concurrencia asisti a los respectivos locales de Accin Vasca y de Euzko Txokoa
para escuchar las conf rendas pronunciadas por el Dr. Vicente de Amezaga respecto a la fecha
histrica del 25 de octubre de 1839 y a la ley que en ese da dict el Parlamento de Madrid que
supone para los vascos una afrenta imborrable y un inicuo despojo de su legitimo patrimonio de
libertad. Habl estudiando el hecho triste del fracaso de la unidad poltica vasca en la historia,
describe la guerra heroica de los vascos durante los aos que median entre 1833 y 1839. Seis
largos aos de lucha sangrienta para salvar los fueros y el desengao al olvidar la promesa de
Bergara. La disertacin llega a su trmino con un clido canto a la libertad vasca y con un
recuerdo en el que palpita la ms honda emocin. Una ovacin cerrada, unnime y prolongada
premi la brillante conferencia del Dr. Amezaga, magnifica en verdad, bella, conceptuosa y llena
de savia, genuinamente nuestra, la misma que corri por el tronco del viejo roble y ahora de
fronda de esperanza al que se eleva en Euzkadiy a cuya sombra soamos volver^. En dichas
charlas trata Amezaga en profundidad la problemtica del euskera desde muy diversas
perspectivas, poltica, administrativa, lingistica, normativa, histrico-cultural, y divulgativa.
El ao 1943 haba comenzado bendecido con el nacimiento en enero de su tercera hija, Arantzazu.
A mediados de ao, el 20 de julio de 1943, el proyecto de fundar un Instituto Americano de
Estudios Vascos segn el modelo de Eusko Ikaskuntzade 1918, es ya un hecho. En Buenos Aires,
concretamente en la casa de uno de los socios fundadores, Enrique Ganda, un grupo de
argentinos de ascendencia vasca y de vascos residentes en quienes alienta la conciencia y el
pundonor de la estirpe patente en el misterio del apellido le dieron vida por el sencillo
procedimiento de estampar sus nombres en la primera pgina del que sera su libro de actas 12.
Firmaron junto a Vicente Amezaga otras veintids personalidades del mundo de la cultura y la
lengua vascas, entre otros, Justo Garate, Andrs Irujo, Isaac Lpez Mendizabal, Pedro Basaldua o
monseor Nicols Esandi, obispo de Viedma. El espritu que guiaba este proyecto era, tal como
refiere el artculo segundo de los estatutos adoptados en la segunda sesin, el 19 de agosto
siguiente, unir a los amantes del Pas Vasco, especializados en algn aspecto de su prehistoria,
historia, antropologa, folklore, lengua, literatura, derecho, economa, arte y demos ciencias, e
intensificar estos esludios, profundizando en ellos y divulgndolos.
A principios de ao haba recibido el encargo de ingresar en el comit para la organizacin de la
Semana Cultural Vasca de Montevideo para lo cual hubo de trasladarse a esta ciudad al otro lado
del Plata y de la cual se enamorara, hasta el punto de que, el 2 de septiembre de 1943, se
trasladaba la familia a la capital uruguaya donde residirn durante doce propicios aos. La
Semana Cultural Vasca es un acontecimiento de inmensa trascendencia en la vida del exilio vasco
en Amrica. Conscientes de la prolongacin de la guerra y empapados de incertidumbre en torno
a la poltica internacional en torno al gobierno del general Franco, la Semana Cultural constituye
un primer saludo de la comunidad vasca a Uruguay y al conjunto de Amrica, parte integrante de
la vida cultural, poltica, intelectual y social del nuevo continente. Por vez primera se celebraba a
puertas abiertas ante el mundo americano un festival folklrico y cultural de tal magnitud 33. Por
primera vez se invitaba a participar en dichas celebraciones a personalidades representativas de la
vida intelectual, artstica y poltica americana. Un saludo y una muestra de profundo
160
agradecimiento a figuras como Ortiz Lizardi34, presidente de la Repblica Argentina al que tanto
deben los vascos del exilio, Juan Jos Amezaga, presidente de la Repblica Oriental del Uruguay y
otros personajes de la vida poltica americana que no nicamente permitieron sino que
favorecieron, facilitaron y financiaron la adopcin de esta poblacin apatrida, vencida y humillada
en su casa.
Se encomend a Amezaga junto a otros la labor de contactar con las personalidades polticas y la
prensa uruguayas e impulsar, meses antes de la celebracin de la Semana Vasca y como preludio
a la misma, todo un ciclo de artculos en
32
Boletn de! Instituto Americano de estudios Vascos, Ao I, n." 1, Buenos Aires, abril-junio,
1950,p. 2.
33
Se coment siempre en el Euskal Erria de Montevideo que fue durante la celebracin de esta
Semana Vasca cuando, por vez piimera en Amrica, se exhiba la ikurria en un desfile y ante
pblico congregado con tal motivo.
34
Hijo de emigrantes navarros y casado con la tambin hija de emigrantes vascos, Luisa
Iribarrcn.
161
torno a la naturaleza, historia y vida, de los vascos en Amrica, por aquel entonces ciertamente
poco conocida. Result la primera de las tareas ms fcil de lo que aparentemente pareciera. Era
por aquel entonces presidente de la Repblica del Uruguay, Juan Jos Amezaga, oriundo de
emigrantes vascos de su Getxo natal y al cual unan lazos de sangre de dos generaciones atrs.
Un primer encuentro entre ambos seria suficiente para captar el apoyo institucional del gobierno a
la semana de los vascos. Tampoco resultara difcil establecer vnculos con la prensa del pas, El
Piala, El Da, El Pas, La Maana y otros en los que ms tarde escribira Amezaga un gran nmero
de artculos35.
Se seal el da 30 de octubre de 1943, evocacin de la abolicin foral, como fecha idnea para la
celebracin de la sesin inaugural de los actos que iban a tener lugar en la capital uruguaya
durante las dos semanas siguientes. Una vez finalizadas las celebraciones, el articulista de El
Plata lo describira asi: la Semana Cultural Vasca de Montevideo tuvo como prembulo una
conferencia del Dr. Vicente Amezaga celebrada en el paraninfo de la Universidad el da 15 de
octubre en la que dise sobre ia figura del poeta popular vasco Pedro de Enbeita del que cant
algunos versos. Hizo resaltar cmo Enbeita. al mismo tiempo que un inspirado artista, fue uno de
los ms eficaces portavoces del movimiento nacional vasco. Asisti numeroso pblico as como al
coktaii danzante que el da 17 se dio en los salones del Parque Hotel. Despus de estos dos actos
preparatorios y de una serie de charlas por radio, diariamente realizadas y en las que tomaron
parte los doctores vascos Aldasoro y Amezaga y los uruguayos Gorriti, Zorrilla de San Martn,
Moch y Zubillaga; seores guain y Telleixea y seoras Mara Ana Bide
No puedo menos que citar aqu alguna de las muchas impresiones con que agradeci Ral M.
Buslamante, a la sazn miembro del equipa directivo de El Plata, las muchas aportaciones de
Amezaga al diario uruguayo. Muy rara vez se lee en prensa de Montevideo una obra de tan fina y
alia cu/tura como la que constituye ene bellsimo arrenlo. Por su espritu, por su elevacin, por su
aticismo, en digno de los grandes diarios europeos. Ese articulo vale por lodo el largo y pesado
silencio que la prensa del pas ha guantada aira ti Academia durante sus seis aos de existencia.
Gracias, pues, sean dadas a quien tan noblemente interpretay hnrala labor de la Academia
Nacional de Letras. (Montevideo, 18 de junio de 1948). Con motivo de un artculo posterior
escriba el mismo autor, qu aliara de pensamiento, qu viva penetracin, qu pursima fusin
entre el concepto y el lenguaje, qu belleza deforma, qu hidalgua de corazn y cmo desborda
de las clusulas el afecto (...) hacia este pueblo desprendido de la entraa materna que. con a
riqueza del linaje, mantiene intactos, en los "pozos hondos ". el amor filial y las virtudes
heredadas. (...) Crea, Dr. Amezaga, que a prez con que me enriquece su artculo (...), no
solamente me ha deparado una de as ms grandes honras de mi vida sino tambin una de las
ms puras alegras espirituales de las muchas que he erpurimenladv eslos dios. (Montevideo, 25
de octubre de 1952).
162
garay de Jansen^, Iribarne de Batll Berres, Dra. Cceresy el Ingeniero Carmnala, entramos en
la semana bastante arbitrariamente as denominada, pues que dio comienzo el da 30 de octubre
para ser clausurada el i 3 de noviembre.
Da 30 de octubre. Este da comenzaron os actos con la apertura de la exposicin de arte vasco
en los salones del Museo de Bellas artes a las 8:30. Asisti al acto inaugural el presidente de la
Repblica Dr. Juan Jos Amezaga, as como el presidente de la Alta Corte de Justicia, que lo es
tambin de la Comisin de Honor de la Semana Vasca, Dr. Julio Guan y otras distinguidas
personalidades uruguayas.
El presidente de Comisin de Caballeros, Sr. Julio Garra, ley unas cuartillas alusivas, hacindolo
igualmente la presidenta de la Comisin de Damas, Sra. Mara Ana Bidegaruy de Jansen. Cerr los
discursos elocuentemente el Dr. Almeida Pintos, Director General de Instruccin Pblica que
llevaba la representacin del ministro Sr. Folie Joanic que se vio imposibilitado de asistir.
Por a noche en el Servicio Oficial de Difusin Radio-Elctrica (S.O.D.R.E.), a las 21:45 tuvo lugar
la velada en honor del presidente Amezaga, de ascendencia vasca como su apellido lo declara. El
Sr. presdeme asisti a la funcin desde su comienzo hasta la terminacin, ya de madrugada,
dando constantes seales de aprobacin y repitindose algunos nmeros ante el agrado de que
dio muestras. El delegado vasco, Sr. Aldasoro, ministro del Gobierno del Dr. Aguirre, apareca
sentado a la derecha del Dr. Amezaga en el palco presidencial en eite se hallaba tambin el
presidente de la Alta Corte de Justicia don Julio Guan, el Ministro de Interior Carbajal Victorica, el
de Instruccin Pblica Folie Joanic y varios otros destacados miembros del Gobierno.
El teatro pareca completamente lleno de espectadores que aplaudieron con fervor los cantos y
danzas populares de las distintas regiones de Euzkadi que fueron interpretados por los artistas
que en nmero de alrededor de 220 son, en su inmensa mayora, refugiados polticos.
Previamente al espectculo folklrico hubo en el mismo teatro dos conferencias. La una del
ingeniero Urbano de Aguirre, presidente del Comit Pro-nmigmcin Vasca de la Argentina y
destacada figura poltica de aquel pas. La otra disertacin corri a cargo del mximo orador
uruguayo Dr. ruretagoyena. Ambos, como se ve por sus apellidos, descendientes de vascos,
abundaron en hermosos conceptos sobre la raza de sus antepasados y fueron muy aplaudidos. La
hermosa conferencia del Dr, ruretagoyena apareci ntegra en el diario vespertino El Plata del da
2 del corriente.
36
Mara Ana Bldegaray de Jansen ba a ser, en el transcurrir de los aos, madrina de su quinto
hijo, Xabier Iaki, junto al padre Goikoelea, confesor del presidenta Orz Lizardi y promotor de la
creacin del Comit Pro-Ayuda.
163
Da 31 de octubre. El domingo, da 31, se iniciaron los actos con una mina solemne celebrada en
a catedral y en la que oficiaron los sacerdotes vascos padres Aguirrezabal, Ariztimuo y
Goikoetxea, refugiados tambin. El magnifico coro Lagun Onak interpret la parte musical. A la
salida de la misa, os concurrentes, precedidos de los alegres xistularis y de un grupo de jvenes
que marchaba danzando por las calles de la ciudad (espectculo nunca visto aqu y presenciado
por el pueblo con una total simpata), se dirigieron a la Plaza de la Independencia donde tuvo
lugar el homenaje a los Artigas, Los coros unas ciento cincuenta voces acompaados de la
banda municipal de Montevideo, interpretaron los himnos uruguayo y vasco. A continuacin el Dr,
Gorriti hizo resaltar en breves y elocuentes palabras la significacin del acto que fue presidido por
el intendente municipal, Ingeniero Juan Fabini.
Por la tarde de este da se repiti en el S.O.D.R.E. el mismo espectculo folklrico vasco de la
noche anterior, asistiendo entre otras personalidades el intendente municipal. Ingeniero Fabini.
Da I de noviembre. Este da, a las once de la maana, tuvo lugar un acto de homenaje a Bruno
Mauricio de Zabala, el gran vasco fundador de Montevideo. Hicieron uso de la palabra la Dra.
Amesoyde Moch, elDr. fcente Amezaga y el Sr, Rmulo Bollo que llevaba la representacin del
intendente municipal que no pudo asistir. Despus de los discursos que fueron muy aplaudidos, se
hicieron en a misma plaza de Zabala unas demostraciones de danzas vascas que el pblico
presenci muy complacido.
Por la tarde en el S.O.D.R.E. y con un lleno completo, el coro vasco Lagun Onak dio un concierto
de msica sacra interpretando la Misa en La Bemol de Schubert. La audicin constituy un
verdadero xito por su esplndida ejecucin.
Da 3 de noviembre. En el saln de Bellas Arles, donde se muestra a exposicin de pintura vasca
contempornea, se inici, el da 3, el ciclo de conferencias con una del Dr. fcente Amezaga que
disert sobre el tema Gernika y las libertades vascas. Fue un estudio de las libertades
individuales, econmico-sociales, religiosas y polticas alea como se desprenden de los cdigos
vascos y de diversos hechos histricos. Al final, destac el conferenciante que hacia pocos das se
haban cumplido 04 aos de que un golpe traidor y mortal haba sido aplicado a esas libertades
que, abrigamos afirme esperanza -dijo el orador- como las ms puras y antiguas del mundo
sern restablecidas cuando, con el prximo triunf de las democracias, se instaure en la tierra un
rgimen de justicia y libertad. La sala estaba repleta de pblico que mostr, con sus reiterados
aplausos, su identificacin con el conferenciante.
Da 4 de noviembre. A las 18:30, el doctor uruguayo Pedro de Zubilaga disert en el mismo lugar
sobre el significado de la Semana Cultural Vasca. Recogi varios de os conceptos vertidos el da
anterior por el Dr. Amezaga, sobre todo, el
164
165
Dr. Yeregi, el catedrtico de derecho constitucional Dr. Jimnez deAretxaga, literatos Srs. Sabat
Ercasti, Oribe, Zorrilla de San Martin, etc., en Usa que seria interminable.
Para concluir hemos de hacer notar que entre las personalidades asistentes a los actos, lo mismo
que en las pertenecientes a as distintas comisiones, haba personas de todos los partidos
polticos uruguayos sin distincin. A consignar la adhesin que el partido herrerista, reunido en
convencin, decidi prestar a a Semana.
Constituy sta, en suma, una honda vibracin y una esplndida manifestacin del espritu vasco
que florece con un vigor renovado de su viejo ronco. Floracin que es seguro anuncio de frutos
sazonados de cultura y libertad que con alegra y confianza esperamos.
Pero 1943 dara mucho ms de s. Tras una serie de contactos a raz de la Semana Vasca con el
rector de la facultad de humanidades de la Universidad de Montevideo y catedrtico de derecho
constitucional de la misma, Dr. Jimnez de Aretxaga, ambos acuerdan la creacin de una ctedra
de Cultura Vasca en ia facultad de humanidades y ciencias de la Universidad de Montevideo. Era
sta la primera experiencia de este tipo que se realizaba en Amrica y, muy posiblemente, la
primera ctedra universitaria de estudios vascos posterior a 1936. Las clases, que se prolongaban
anualmente durante todo el invierno austral, daran comienzo el da quince de abril, con un
estudio del poema Euskaidunak de Orixe, ella la obra de Orixe-fue el tema de mi primer curso en
la ctedra de Cultura Vasca de la Facultad de Humanidades de Montevideo, por encargo de la cual
y con la inapreciable ayuda, en algunas dificultades, del propio Orixe, cuyas notas de puo y letra
conservo como precioso recuerdo, traduje el poema Euskaidunak ntegra y totalmente^.
Lamentablemente esta traduccin de indudable valor lingstico y literario permanece indita.
Paralelamente organiza Amezaga con la colaboracin de Jos Claudio William, director de estudios
del Instituto de Estudios Superiores de Montevideo, un Curso de Lengua y Literatura Vascas desde
entonces adscrito a dicha institucin. Ambas responsabilidades quedaran a cargo de Amezaga a
todo lo largo de su exiliouruguayo.de 1943 a 1955. La paralela formacin de la Academia de las
Letras de Uruguay este mismo ao y la creacin a principios de 1944 de la Comisin de Arte y
Cultura en el Euskal Erria de la que sera Amezaga precursor junto a Gortari, primer presidente de
la misma, abri las puertas a un proluso dilogo intelectual entre las culturas vasca y americana.
Se cumpla as uno de los
W "Nicols Ormaetxea, Orixe" en Vicente Amezaga Aresti, El Hombre Vasco, Ekin, Buenos Aires,
1967, p. 304.
166
sueos en la vida de Amezaga que desde la Delegacin de Cultura del Gobierno de Euskadi habia
impulsado la presencia del euskera en los primeros aos de la enseanza, vea ahora el euskera
en la universidad, era definitivamente sta a los ojos del mundo una lengua que estaba, al otro
lado del ocano, conquistando el respeto que se merece entre todas las dems, respeto que le era
y le seguir siendo negado a su pueblo y en su tierra.
1943 constituye asimismo el ao de la traduccin en la vida de Amezaga. La traduccin del
annimo del siglo XVI castellano No me mueve mi Dios para quererte, inicia la lista de los cerca
de cincuenta trabajos que abordar hasta su muerte.
1944 se abra con todo un nuevo ciclo de actividades. El 13 de mayo se inauguraba en Montevideo
la Plaza Gernika en conmemoracin de los muertos en aquella accin y como reconocimiento de
las autoridades de la Repblica del Uruguay a los recin llegados exilados vascos. Acudieron al
acto el alcalde de Montevideo, Juan Fabian junto a otras autoridades polticas del pas, adems de
diversos representantes de los cuerpos diplomticos de Blgica, Checoslovaquia, Mxico, Polonia y
Venezuela. Result ser un acontecimiento de gran trascendencia en la vida poltica del pas. El
discurso de inauguracin corri a cargo de Amezaga, nuestro agradecimiento manifestaba el autor
se extiende, amplio y profundo, a los representantes de los pases aqu congregados que,
amantes de ia libertad, que, como nosotros, ven en Gernika uno de sus ms antiguos y autnticos
smbolos. Recordaba yo, en estos momentos aquellos actos sencillos pero preados de hondo
afecto y emocin cordial en medio de los cuales se dio el nombre de Montevideo a una de las
cal/es de la capital de Bizkaia. No han pasado an muchos aos y he aqu que ia Intendencia de
Montevideo y la Junta Departamental, haciendo realidad un acuerdo que hall inmediatamente
resonancia en todas las dems juntas departamentales de la Repblica, consagra al recuerdo de
Gernika la plaza que hoy inauguramos. Y tiene esta inauguracin un hondo significado. (...) El
siglo pasado vio el ocaso de nuestras libertades. La violencia y la perfidia se confabularon y as
asambleas soberanas de Gernika dejaron de legislar. Y, tras una parcial recuperacin de nuestra
independencia iniciada en la misma Gernika el 7 de octubre de 1936, la tirana que ha convertido
al mundo en una charca impura de sangre, sudor y lgrimas se abati feroz sobre nuestra villa
santa hacindola cabeza de la tremenda lista que continuaron Coventry, Lydice... tantas ciudades
mrtires. Porque era terriblemente fatal que la cuna de tas libertades sufriera las primicias de la
tirana. Y henos aqu, amigos del Uruguay, peregrinos por los caminos del mundo, hambrientos de
justicia, sedientos de libertad. Vuestra presencia en este acto demuestra que conocis y
comprendis nuestra tragedia. Vuestras caras amigas nos dicen muy bien lo mucho que podemos
esperar de vosotros en el camino hacia nuestra libertad. Esperamos mucho de vosotros, amigos
del Uruguay. De vosotros que amis toda causa justa y sois paladines natos de toda empresa
noble. Amigos del Uruguay,
167
porque amis ajusticia, sabis muy bien que cuando a ella, en el ms pequeo de sus miembros
se a hiere, lodo su cuerpo queda vulnerado. Porque amis la justicia habis comprendido muy
bien que, si al pueblo vasco, cuna de libertades, modelo de ciudadana, espejo de democracias,
slo por su pequenez le fuera mezquineado ese pan de la justicia y de la libertad que desde hace
un siglo viene hambreando, se habran perdido miserablemente para la causa de la libertad y la
justicia y la democracia en todo el mundo esos torrentes de sangre generosa que en tierra, en
mar y en os aires hoy se estn derramando en su nombre**.
Con motivo del desembarco de Normanda el 6 de junio de 1944 y la retirada de las tropas del III
Reich de Iparralde, participara Amezaga en la organizacin impulsada por la Delegacin Vasca de
un acto en el Club Uruguay con motivo de la creacin de un Comit Pro-ayuda para la poblacin
de los tres territorios ultrapirenaicos. A la misma acudieron, al igual que haban hecho a la
Semana Vasca, el presidente de la Repblica, Juan Jos Amezaga, adems de personalidades del
cuerpo diplomtico de Argentina.
El 18 de abril de 1945 naca su cuarto hijo y primer varn al que pusieron el nombre del padre,
Bingen. El 23 de abril de dicho ao las tropas rusas toman Berln y, el 4, 7 y 8 de mayo se
firmaban las capitulaciones lo cual significaba el fin de la contienda y el inicio de la presin
internacional sobre el gobierno del general Franco en el que tantas esperanzas pusieran los vascos
del exilio. En agosto vea la luz el primer nmero de Galeuzca en Buenos Aires, revista mensual
que se imprimir en la capital argentina hasta julio de 1946. La colaboracin de Amezaga en esta
publicacin no fue muy intensa, si bien a travs de su amistad con Tellagorri, particip en charlas
y cubri en la prensa de Montevideo las actividades que tuvieron lugar el verano de 1945. Se
creaba el Consejo Gallego constituido por varios diputados residentes en el continente americano
y encabezado por Alfonso R. Castetao con quien Amezaga entablara amistad. Los dias 28 de junio
al 1 de julio de ese mismo ao, antes de la aparicin del primero de los doce nmeros que de
Galeuzca se iban a publicar en Buenos Aires, se celebraron una serie de actos en los que
participara, una vez ms, el presidente de la Repblica, Juan Jos Amezaga. Vicente Amezaga por
su parte asistir al acto poltico celebrado en el teatro del Ateneo de la ciudad la noche del 30 de
junio asi como al banquete que en honor del Consejo de Galicia se celebrar el primero de julio y
que cerrar con el discurso del delegado del Gobierno de Euskadi en Argentina, Ramn M."
Aldasoro.
No obstante, 1945 se cerraba con una trgica noticia. Los buques mercantes que provenientes de
las costas de Euskadi atracaban en Amrica constituan un gran nexo con familiares y amigos a
ambos lados del ocano. A ms de un rico
36
168
intercambio con todo tipo de mercaduras entre familiares de uno y otro lado del Atlntico, los
barcos llegaban cargados de cartas y noticias sobre la situacin de familiares y allegados. El
buque que en diciembre atrac en el puerto de Montevideo le acerc la noticia de la muerte de
Mara Aresti, su madre. Nostalgia, dolor, impotencia, stos son algunos de los sentimientos que
afloran en las composiciones poticas en las que llora su falta y lamenta el destierro de un hijo en
aquellos momentos de dolor. El tono agrio y sombro de sus composiciones poticas se contagia
asimismo a sus artculos culturales y polticos, Urrundik, Lzaro, teidos de severo abatimiento,
parceme que vivo en un desierto escribi Amezaga y ms que vivo creo ser ya un muerto, un
muerto que so estar viviendo.
Vida y muerte, siempre de la mano, el 11 de mayo 1947 nace su quinto y ltimo hijo, Xabier y,
ocho meses ms tarde, el 15 enero de 1948, llegaba su hija mayor, Mirentxu, a Montevideo, a
quien, a sus nueve aos de edad, iba a conocer.
La semana del 12 al 19 de septiembre de 1948 se celebraba en Miarritze el VII Congreso de
Estudios Vascos. Amezaga no podra acudir al mismo por motivos econmicos, no obstante, cubri
abundantemente en la prensa local, concretamente en los diarios Crnica de Montevideo, El Da y
El Plata, el evento, "antes conquistar Esparta la guerrera que Atenas la sabia ", pudo decir Filipo
de Macedonia, y nosotros hemos conocido bien cuan profunda y aleccionadora verdad hay en
estas palabras. No sern ya las montaas sino nuestro propio espritu cultivado en todas sus
facetas y dimensiones quien har invencible a nuestra patria. "Azmoz ta Jakilez " es el lema de a
Sociedad de Estudios Vascos, esto es, "Por el Pensamiento y por el Saber ". Porque como reza el
mote herldico de la vieja casa vasca de donde ese lema se tom, el chico puede vencer al
grande, el bajo alcanzar al alto y el dbil igualar al fuerte^.
1950 viene marcado por la entrada del estado franquista en la ONU. La negativa de 1946 no haba
hecho sino aplazar este si de 1950. Los pactos hispanoamericanos de 1951 confirmaron los peores
augurios. En 1945 nombraba el presidente de los Estados Unidos, Franklin D. Roosvelt a Norman
Armour embajador en Madrid. Por carta fechada el 10 de marzo de 1945, Roosvelt expona a
Armour su parecer en torno a la cuestin de las relaciones internacionales con el rgimen de
Franco, no olvidamos a posicin oficial de Espaa con su ayuda a nuestros enemigos del "eje" en
momentos en que la suerte de la guerra nos era menos favorable, ni podemos pasar por alto las
actividades, designios, organizaciones y declaraciones pblicas de la Falange en el pasado y en el
presente. (...) Hay cosas que podramos hacer y que con todo placer en el terreno econmico u
otros terre
39
"Biarritz y oros pueblos de! Pirineo sern el escenario de nuestras expresiones culturales"
Azmoz la Jakilez, agosto 30, 1948.
169
nos para demostrar esa amistad (con Espaa). Sin embargo, la iniciacin de ales medidas est
Juera de cuestin ahora que los sentimientos norteamericanos son tan contrarios al actual
rgimen en el poder en Espaa*". Esta carta, reproducida enteramente en el nmero de octubre
de Gaeuzca, representaba un mucho de esperanza sobre la actuacin de las potencias aliadas en
torno a la cuestin del fascismo espaol. No en vano goz el presidente norteamericano F.D.
Roosvelt de la simpata y particip de la colaboracin de los vascos del exilio por su poltica en
torno a la cuestin del reconocimiento del rgimen totalitario del general Franco. Amezaga
dedicara un poema, La sonrisa de Roosvelt, a este presidente que en 1941 declaraba la guerra al
eje al alcanzar, en noviembre de ese mismo ao y a bordo del vapor Quanza, las costas
americanas41.
En la Conferencia de Yalta, celebrada el 11 de febrero de 1945, se ratific la polica acordada en
la Conferencia de Tehern el primero de diciembre de 1943 en relacin al restablecimiento ci la
democracia en aquellos pueblos liberados del dominio de la Alemania nazi y los pueblos que eran
antiguos satlites del eje en Europa 12. En virtud de la Declaracin de Postdam, adoptada el 17 de
julio de 1945, los gobiernos de Estados Unidos, Gran Bretaa y la URSS, se consideran obligados
a poner en
40
41
170
claro que, por su parte, no apoyarn ninguna solicitud de incorporacin por parle del actual
gobierno espaol que, habiendo sido creado con ayuda de las potencias del eje, no est, en vista
de su origen, su carcter y su actuacin y su estrecha colaboracin con los estados agresores, en
condiciones de justificar esa incorporacin^. En la reunin plenaria de Naciones Unidas celebrada
en Londres el 9 de febrero de 1946, se ratificaron las resoluciones tomadas en Postdam y San
Francisco sobre la exclusin del estado espaol de la ONU. Por otro lado el estado francs
propona tratar el caso espaol en el Consejo de Seguridad por entender que su permanencia
constituye un peligro para la paz y seguridad internacionales^.
La intervencin de las delegaciones vascas en torno a esta cuestin fue muy activa. El
Lehendakari Aguirre colabor estrechamente con el presidente de la Repblica espaola, Jos
Giral, ante el comit investigador de Naciones Unidos en el Caso Franco. La cuestin fundamental
era sin duda la intepretacin del artculo 39 de la Carta de Naciones Unidas, a saber, la posibilidad
de intervencin de Naciones Unidas en ciertas cuestiones susceptibles de conducir a friccin
internacional o dar origen a una controversia de tal naturaleza. Ello supona chocar de frente
contra e! principio de no-intervencin. El 4 de marzo de 1946 los gobiernos de Estados Unidos,
Francia y Gran Bretaa, los tres miembros del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y, por
ende, con derecho de veto, hacan pblica una nueva declaracin sobre la exclusin del estado
espaol del marco de la politica internacional hasta la celebracin de elecciones libres. Finalmente
el Consejo de Seguridad, mediante resolucin adoptada el 29 de abril de este mismo ao,
declaraba unnimemente la condena moral del rgimen de Franco.
stos y posteriores logros en poltica internacional suponan cuando menos un reconocimiento de
la justicia de la causa vasca y ofrecan esperanzas sobre un pronto fin del exilio. Durante los aos
de 1944 y 1946 Amezaga particip activamente en el Cajo Franco. Lo cierto es que no supuso una
difcil tarea, tras unas pocas y breves entrevistas con el presidente Amezaga as como con el
senador por el partido Accin Cvica, Dardo Regules, por aquel entonces director del diario El Bien
Pblico, se hizo bien patente la posicin del gobierno uruguayo, la Repblica del Uruguay jams
reconocera el gobierno fascista de Franco. La implicacin d Amezaga en esta cuestin le vali el
veto de la representacin de la embajada espaola en las oposiciones a las que en 1950 se
present para acceder a un puesto en las oficinas de la UNESCO en Paris.
En 1950 la poltica internacional haba sufrido un brusco giro. Sumergidos en plena guerra fra y
tras el estallido de la Guerra de Corea, el gobierno de los
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44
171
4S
Habla acusado Amezaga con anterioridad un mal estomacal que con los aos
degenerarla en e) cncer de hgado que le causarla la muerte. A consecuencia de estas
dolencias perder totalmente la capacidad auditiva de un odo.
Euskal Erria, ao XXXIX, n. 976, Montevideo, febrero, 1951.
*' El Plata, septiembre, 1953.
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172
un pequeo detalle en recuerdo y agradecimiento por la ayuda que del gobierno britnico
recibieron los nios de las colonias vascas de) sur de Inglaterra y Gales.
Este mismo ao de 1953 emprende asimismo Amezaga la traduccin del Platero y Yo, obra del
poeta Juan Ramn Jimnez (1881-1958). Envi Amezaga una copia del Platero ta Biok, editado
por Florensa (Montevideo, 1953) a Juan Ramn quien le escribiera una carta entraable que, por
desgracia, se ha perdido. En la misma agradeca calurosamente el poeta la traduccin que en su
da se deposit en el museo Juan Ramn Jimnez de su pueblo natal de Moguer.
El 6 de julio de 1954 es nombrado, siendo por aquel entonces Julio Garra presidente del Euskal
Erna de Montevideo, miembro del Consejo Directivo de dicho centro, dado su amor probado a la
Institucin a que pertenece y sus anhelos por a prosperidad de la misma**. Una de las primeras
tareas que hubo de afrontar como miembro directivo del Euskal Erria fue cubrir el desarrollo del
VIH Congreso de Estudios Vascos que se celebrara en Miarritze durante el mes de septiembre de
dicho ao, participando, desde Montevideo, con un trabajo muy interesante sobre la traduccin
para la seccin de literatura de dicho Congreso.
Coincidiendo con este VIH Congreso, Amezaga es nombrado por Justino Zabala, ministro de
Instruccin Pblica y Previsin Social del Uruguay y presidente de la octava Conferencia Mundial
de la UNESCO en Montevideo, delegado de dicho ministerio ante la UNESCO. Su tarea, la
coordinacin general de la organizacin de la conferencia que se celebrara durante el mes de
diciembre en Montevideo. Para dicho fin colabora estrechamente con Antonio Gamarra, jefe de la
secretara de prensa de la UNESCO para la Amrica latina. Acompaan al seguimiento de la
conferencia toda una larga serie de actos culturales y deportivos que se llevaran a cargo en el
Estadio Centenario. Entre los actos organizados por Amezaga es de destacar la visita al Uruguay
de Francisco Javier Landaburu en representacin del Lehendakari Aguirre, la prensa cubri
ampliamente el evento bajo el epgrafe El Ministro Muniz y os Vascos^. En colaboracin con el
rector de
*"* Euskal Erria, Consejo Directivo, 1954.
50
Don Justino Zabala Muniz, ministro de Instruccin Pblica del Uruguay y presidente de a
Octava Conferencia general de la UNESCO, recibi en su despacho del Palacio Legislativo a don
Francisco Javier de Landabum que, acompaado de don fcente de Amezaga, catedrtico de
Cultura Vasca de la Universidad de Montevideo, llevaba ai doctor Zabala un mensaje de
admiracin. El seor Zabala, hijo de vasco, correspondi en trminos muy afectuosos para el
presidente de Euzkadi y para la causa del pueblo vasco, de la que siempre ha sido un fiel
defensor. El seor Zabala Muniz retuvo a sus visitantes durante veinte minutos, interesndose con
mucha atencin por la situacin actual de la poltica y de la cultura vascas. Invitado por el
seorAmezaga, se propone asistir a a conmemoracin del Da del Euskera, que se celebrar en
los salones de la saciedad Euskal Erria de Montevideo el da 3 de diciembre. La conferencia
tradicional en esta fiesta estar este ao a cargo del seor Landaburu. Vanos delegados y altos
funcionarios de la UNESCO se proponen tambin asistir a ese acta. Montevideo, diciembre (OPE).
173
174
nes", "nuevos materiales", "reproducciones en colores" y "horizontes del cine", otras que nacieron
de la iniciativa de entidades uruguayas o simplemente del impulso particular. As tuvimos la de
Bellas Artes, la retrospectiva del arte uruguayo, la de la Comedia Nacional, la de los alumnos de
la Escuela Nacional de Bellas Artes, la de los pintores holandeses modernos... y con ellas, las de
Arzadun, Castellanos, Aliseris. ..y, en otro orden, no son para olvidar a del libro (Biblioteca
Nacional), la del libro y arte chinos, la de libros, documentos, esculturas y retratos de escritores
nacionales, etc. El teatro no poda estar ausente y la Comedia Nacional contribuy con hermosas
representaciones de Florencio Snchez, "En familia ", y Caldern de la Barca, "El Alcalde de
Zalamea ". Y en el Sals "La Novia Vendida " de Smetana y "Cossifan Tute " de Mozart. Y tuvimos
en el S.O.D.R.E. un brillante espectculo coreogrfico a cargo del cuerpo de dicha institucin y ni
siquiera falt a ola extica de la exhibicin de ballet indio a cargo de la integrante de a
delegacin de dicho pas a la UNESCO, Srmati Rukmini Devi. Junto a esto, podemos recordar las
diversas muestras de danzas nativas y las fiestas folklricas presentadas, todos los unes por el
Instituto Panamericano de Folklore. Y el culto de nuestra juventud a los sanos valores fsicos tuvo
adecuada expresin en aquel acto de los Uceles en el Estadio Centenario, que Jue algo que por
su esplendidez sorprendi a muchos de nuestros visitantes, as como el desfile atltico realizado
en el parque Batll y Ordez. El cine nos hizo disfrutar de verdaderas joyas, ya en la sala de
proyecciones instalada en la biblioteca del Palacio Legislativo, ya en las funciones organizadas por
el S.O.D.R.E., bien en su misma sede, bien en otros lugares, como la facultad de medicina, la de
arquitectura, Museo Pedaggico, Subterrneo, Ateneo, etc. La colaboracin que las diversas
delegaciones prestaron con sus respectivas cintas, es digna de todos los elogios, pero,
permtasenos que guardando el mejor recuerdo para todo lo que vimos, nuestra admiracin vaya,
una vez ms, a aquel. "Romeo y Julieta " en que la palabra de Shakespeare, el escenario de
Verona y el ambiente creado por una inteligentsima sntesis de los maestros italianos, todo ello
en felicsima conjuncin, nos brindara uno de los mayores logros que la pantalla haya conocido
hasta la fecha. Y la ms inmaterial de las artes dijo su palabra alada en aquel concierto de msica
americana que nos ofreci la orquesta del S.O.D.R.E. y en aquel festival de los coros de
Montevideo, y a travs del Coro Municipal Infantil y, sobretodo, en aquella inolvidable
presentacin de los coros del interior que supieron poblar el nocturno silencio del estadio con
raudales de armona que sus miles de ejecutantes supieron hacer brotar, tanto como de su
emocin artstica, de su ejemplar sentido de dedicacin con que honraron al Uruguay ante los
cientos de delegados de la cultura mundial all presentes. Y no pudo faltar, finalmente, la palabra
autorizada de sabios y artistas que, con motivo de a Conferencia se haban congregado aqu, Y
entre otras tribunas, por la del Paraninfo de la Universidad desfilaron grandes figuras de la
inteligencia y de la
175
libertad. Porque ya lo dijo el Dr. Regules, brillante introductor de uno de los disertantes: "a
universidad es a casa de la inteligencia; y tanto escndalo de la Inteligencia sera que los ateos
ocuparan los pulpitos de la catedrales como que los totalitarios ocupasen las ctedras de las
universidades ". Recordemos las magistrales exposiciones del profesor Rivet, tan querido y
admirado aqu. La gallarda figura de Francesco Severi, florida ancianidad en cuerpo erguido que
se mostr consumado pedagogo al tratar "lo absoluto y lo relativo en la ciencia ". Vittore Branca,
novsimo comentador de Bocaccio, que en autorizados conceptos y sonora y musical palabra, nos
hizo vivir por una hora en aquel mundo medieval con sus ideales de "amore, fortuna e
gentilezza". Vito, Calo, Ungaretti todos ellos seores de la ctedra. El gran historiador Charles
Webster que, confina irona britnica, nos hizo ver los entretelones de la poltica exterior inglesa.
El cannigo Onaindia que nos transport de la universidad al pueblo para llevarnos otra vez con el
pueblo a la universidad. Hugh Scott, interesantsima figura del parlamento norteamericano que
expuso con claridad y agudeza el sistema poltico de Estados Unidos. El P. Leroy del "College de
France " que demostr ser tan hbil expositor como profundo conocedor de su sugestivo tema "el
hombre y las hormonas". , para terminar, en la misma alta tribuna, conmemoraron el "Da de los
Derechos del Hombre" el rector de la Universidad Arq. Agorio que hizo sonar su palabra
autorizada y docente, clara en la defensa de los Derechos Humanos, clara en la condenacin de
los que los atropeltan. Y, finalmente, la magistral oracin del Dr. Carvajal Pictrica en quien la
sinceridad absoluta del concepto sabe aliarse maravillosamente con la galanura de la frase. De un
modo deslavazado, con omisiones que sabrn perdonrsenos, hemos hecho un recorrido a travs
de los diversos actos celebrados en nuestra capital con motivo de la Conferencia de la UNESCO.
Creemos que esta rpida resea bastar para hacernos ver que vala la pena que la UNESCO nos
visitara, aunque no fuera ms que para que el Uruguay se manifestara en esa plena eclosin
cultural en que durante un mes hemos podido vivir, demostrando que toda tierra ce libertad es
necesariamente tambin suelo escogido para las ms bellas realizaciones del espritu^.
Pero los das del exilio uruguayo daban a su fin. La esplndida democracia parlamentaria, que a
imitacin del modelo suizo haba constituido el Consejo Nacional en 1952, comenzaba ahora a
tambalearse debido a la fuerte depresin econmica de mediados de los aos cincuenta. La
marcha fue forzada y muy dolorosa, volvan a la mente del matrimonio los das del Quanza, del
Alsina y del destierro sin rumbo. Amezaga se despeda del Uruguay con un emotivo artculo
"Uruguay y la UNESCO", El Plata, 24 de diciembre de 1954.
176
"Adis al Uruguay", El Plata, Momevdeo, abril 3, 1955. Nostalgia, 2 vols., pp. 258-259, J.A.
Ascunce, Donostia, 1993.
54
177
sobre la creacin de un Centro de Cultura Vasca en Donibane Lohitzune. Este proyecto abre en
Amezaga nuevas perspectivas e inicia una serie de ciclos culturales y lingsticos sobre las
medidas administrativas a adoptar para evitar la prdida del euskera, durante el exilio y a la hora
del retorno. En un articulo titulado Pro-Resurgimiento del Euskera, expone el autor las lineas
maestras de una poltica en este sentido.
Dentro de las lneas marcadas por Pro-Resurgimiento del Euskera, se impulsan las clases de
euskera en el Centro Vasco para adultos al tiempo que se planifica la formacin de la ikastola
Euzkadi, en la que se formaron, durante los aos de pre-escolar, gran cantidad de nios del
Centro, entre ellos el autor de estas lineas. La creacin de la ikastola Euzkadi es, sin duda, uno de
los mayores logros del exilio vasco. Fue el sueo de muchos y lo hicimos realidad entre todos. Las
hermanas Mujika, Arantza, tziar, Begoa y su madre, que era una mujer excepcional, tenan un
colegio privado en Caracas y fueron ta.i que configuraron el asunto. Al principio fue jardn de
infancia con una andereo, tziar Barrenetxea, fiel u la ikastola, ya que ha permanecido todos
estos aos en ella. Luego sejueron agrepind los grados. El programa rige segn la Ley de
Enseanza de Venezuela pero le damos al euskera un tratamiento especial^. Abri sus puertas
esta ikastola del exilio en 1965, siendo su primera directora Josebe Torrontegui de Zubizarreta. La
ikastola se organizaba, como ms tarde se organizaran las kastolas de Euskal Herria, segn el
modelo cooperativo. De este modo el rgano fundamental de la misma era una Junta de Padres
elegida por la asamblea. De una, el nmero de andereos ascendera a siete y el del alumnado de
treinta el primer ao hasta cerca de 140 en menos de cinco aos. El logro fundamental y razn de
ser primera de esta ikastola del exilio vasco es que los alumnos obtenan el titulo de escolaridad al
finalizar los estudios de primer ciclo, lo cual permita un estudio profundo del euskera inserto en el
propio sistema educativo venezolano (es mucho lo que se debe a los gobiernos de Argentina,
Uruguay y Venezuela que hicieron este sueo y tantos otros posible), Adems de euskera, los
alumnos reciban clases de txistu, danza, pelota, cultura vasca e historia de Euskal Herria.
Paralelamente a estas actividades fundamentales, a las que acompaaba la traduccin y
preparacin de material educativo, se procur dar en el Centro un impulso a todos los aspectos
relacionados con la divulgacin del euskera y la cultura vasca a travs de conferencias, coloquios,
certmenes, competiciones deportivas y realizacin de tareas de investigacin, tal como el estudio
sobre etimologa de apellidos vascos en Venezuela. Por esta labor y una vida dedicada al euskera,
fue nombrado miembro correspondiente de Euskaltzaindia el 26 de septiembre de 1957.
Este honor supuso para Amezaga mucho ms que un reconocimenlo a su trabajo, una profunda
satisfaccin intelectual, supuso la memoria a una vida dedicada a la lengua vasca, un tributo a su
amor por el euskera.
Este mismo ao 1957 comenz asimismo a trabajar como investigador de documentos histricos
venezolanos en el Archivo General de la Nacin. All entablara amistad con las personas ms
destacadas de la vida cultural venezolana del momento, Pedro Grases, Manuel Prez Vila y Mario
Briceo Perozo, director a la sazn del Archivo Nacional. En su calidad de investigador no tardara
en publicar sus primeros artculos y ensayos en el Boletn de la Academia de la Historia, en las
publicaciones de la Fundacin Eugenio Mendoza, en la revista de la Sociedad Bolivariana de
Venezuela, en la Revista del Archivo General de la Nacin, en las Ediciones del Cuatricentenario de
Caracas, en el Boletn Histrico de la Fundacin John Bulln, en la Revista Nacional de Cultura y
en el ndice Literario del diario caraqueo El Universal. Adems de su obra de carcter histrico
continuar con su ingente labor periodstica colaborando fundamentalmente en los diarios El
Nacional?* El Universal y El Faro!, los tres peridicos con mayor tirada del momento. Y,
paralelamente a esta ingente participacin en la prensa y publicaciones peridicas venezolanas,
contina Amezaga colaborando estrechamente con las publicaciones vascas del exilio, Euzko
Deya, Euzko Gogoa, Egan, Gudari, Euzko Gaztedi, la Revista del Centro Vasco de Caracas y
ZerukoArgia de Donostia57.
178
56
El Nacional era considerado por aquel entonces el mejor peri6dico en lengua castellana del
continente americano.
57
179
180
escaleras que crujan y rechinaron las puertas... pero en lo alto de la casa, en el antiguo desvn
que an despeda el olor de los frutos de Venezuela, el perfumado cacao y el de la dulce caita de
azcar, en cajas de maderas cerradas con cuerdas de camo, permaneca intacto el archivo de
la Compaa, Tal como lo dejaron los activos comerciantes vascos el da final, en 783.
ParaAmezaga abrir aquellos polvorientos cajones fue como entrar en el paraso y, por primera
vez, en comunicacin con el espritu de unos papeles mercantiles, se dio cuenta que a Tierra de
Gracia le daba un extraordinario y magnfico fruto: le revelaba el tesoro de un quehacer vasco
que hizo posible el quehacer nacional de Venezuela*.
Entre 1960 y 1961 Amezaga iba a ser testigo de la muerte de dos personas a las que admir y a
las que se senta unido por profimdos lazos de amistad, sentimiento y causa nacionalista. El 22 de
marzo de 1960 muere Jos Antonio Aguirre, cinco dias ms tarde, escriba Amezaga en El
Universal de Caracas un articulo dedicado a este primer lehendakari del Gobierno de Euskadi, s
hay algo que caracteriza el perfil de Jos Antonio ello es la claridad. Claridad que alcanza la
diafanidad en su expresin hablada; claridad an ms difana en su conducta. Claridad en
pensamiento y palabra en el obrar. Conducta rectilnea que nunca supo de desviaciones aunque
stas a veces pareciera que tuvieran que imponerse a aqullas. Tal, por ejemplo, en la obra
fundamental de nuestro primer Lendakari: el Estatuto Vasco. Sabemos muy bien, todos los que
desde chicos fuimos sus amigos, cual fue siempre el pensamiento de Jos Antonio respecto a la
solucin definitiva del problema vasco. Sabemos bien que jams pens l, iparan momento, que
ella fuera la del Estatuto. Pero ste ofreca una oportunidad que hubiera sido insensato
desaprovechar; significaba una parte muy apreciable del tesoro a recuperar; significaba cubrir
una etapa que nos pondra en condiciones magnificas para cumplir con el resto de la jornada. Y
Jos Antonio no dud en consagrar su vida entera a esta etapa, aun sabiendo que el sacrificio que
su lealtad le impona no seria por todos bien entendido. Esto hubo de hacer sangrar ms de una
vez a su corazn. Pero la rectitud de su conciencia pudo reconfortarlo siempre. Y el duelo
imponente que se manifest espontneo a la muerte del Lendakari, desde las capitales a las
ltimas aldeas de Euzkadi, expres, con su insuperable elocuencia, que el pueblo lo comprendi
bien y haba otorgado toda su confianza y afecto a aquel hombre de cuya alma cristalina ningn
pecho vasco pudo dudar jams*-1.
60
De hecho, en 1777, gracias a los xitos comerciales de la Compaa Guipuzcoana, Carlos III,
convierte a la Provincia de Venezuela en Capitana General, nombrando a tal efecto Capitn
General a Luis Unzaga y Amezaga.
61
181
KKSCO,
Ekn, Buenos
La segunda de las prdidas fue la de Nicols Ormaetxea, Orixe, ocurrida el 9 de agosto de 1961,
todos los que estamos aqu sentimos la segundad de que hace pocos das Jaungoikoa llam por su
nombre a Nicols Ormaetxea. Y en pago de la obra que realiz por el euzkera que vale en muchos
aspectos como obra hecha por Dios; en pago de aquella vida limpia y pura, centrada en todo
momento en la propia vida de Cristo, le ha conducido con sus brazos de padre amoroso all donde
todos deseamos que para siempre est. Ala bedi62.
El 10 de mayo de 1962 daba comienzo el Curso de Cultura Vasca que, dentro del ambicioso
proyecto de Universidad Vasca en el exilio, haba impulsado Amezaga desde la secretaria del
Centro Vasco junto a otros miembros de la junta del centro y la colaboracin del grupo Eusko
Gaztedi (EGl) de Caracas. La Asociacin Pro-Univeraidad Vasca emerge como un esfuerzo de
sorprendente envergadura en la Caracas de los sesenta con la vista puesta en la formacin de la
segunda generacin del exilio. Eran estos jvenes nacidos en Venezuela, Argentina, Uruguay y
otros estados americanos, los que, ante la situacin poltica en Euskal Hetria, veran el
derrumbamiento de la dictadura y, a ellos iba a tocar enfrentarse a los retos que plantearla la
transicin politica. Se trataba por tanto de pasar el testigo de la cultura vasca de una generacin
cansada y desterrada a aquella que debia prepararse a fin de encarar el retorno. Este fue el
espritu que anim a Amezaga y a todos con l.
El programa Pro-Universidad daba comienzo, como deca, con un Curso de Cultura Vasca
organizado e impartido por Amezaga. Comentaba Amezaga que la idea de este recorrido
antolgico por la cultura vasca se la dio Modest Mussorgsky (1839-1881). En efecto, le vino a la
mente la forma de los cursos al acudir a un concierto en el Teatro Nacional de Caracas, donde la
Orquesta Nacional de Venezuela ofreci Cuadros para una Exposicin del citado compositor ruso,
msica que evoca el paseo del autor por una galera pictrica. Organiz de este modo Amezaga el
Curso de Cultura Vasca a modo de un paseo cultural por Euskal Herria.
La finalidad de estos cursos se lee en la cartilla de inscripcin- es dar a todos los vascos la
oportunidad de adquirir un slido conocimiento del ser nacional vasco. Estas clases sern
grabadas en cinta magnetofnica y reproducidas en apuntes mimeografiados con objeto de que
todos los asistentes tengan a su disposicin inmediata un acervo de conocimientos hoy dispersos
en libros, revistas, etc. Las citas bibliogrficas suministradas en el curso de las clases sern igual
62
"Nicols Ormaetxea, Orixe" en Vicente Amezaga Aresti, El Hombre Vasco, Ekiit, Buenos
Ais,1967,p,314.
182
El programa abajo transcrito, da una idea del contenido de este interesante curso que abarca
temas de historia, lengua.
Se trata de un completsimo programa dividido en 60 captulos del siguiente modo:
1. La Tierra. Territorio primitivo y actual suelo vasco. Zonas y paisajes. La montaa y el mar.
2. El Hombre Vasco Primitivo. El vasco en la prehistoria. La civilizacin franco-cantbrica; su
alcance y caractersticas. Su supervivencia en la Euzkadi de hoy,
3. El Hombre Vasco Histrico. Concepto del vasco a Iruvs de los griegos y romanos, de la
literatura francesa y la espaola del Siglo de Oro, y de los viajeros extranjeros. Estudio
caractereolgico.
4. El Complejo Agrcola, el Pastoril y el Martimo. Mineros y Terrones.
5. Religin Antigua. Calendario vasco. Mitologa.
6. El Cristianismo. Su introduccin en el pas, Hechiceria. Heterodoxos. Sentido de la
religiosidad vasca.
7. La Lengua Vasca. Caractersticas generales. rea primitiva de la misma. Retroceso de sus
fronteras u travs de las diversas vicisitudes histricas. Influencias.
8. La Casa Vasca. Su funcin tnica y social. Instituciones jurdicas de ella derivadas. La
tronca] dad. El heredero. La comunicacin floral.
9. La Familia. Base de la democracia poltica vasca. El voto fogueral. Otras instituciones de raz
familiar.
10. La Emigracin. Raices y alcances de este problema.
11. El Apellido. Su origen, clases y significacin. Los apellidos vascos en Venezuela.
12. Gremios y Cofradas Antiguas. Las relaciones de vecindad.
13. El Municipio. Autnomo y democrtico. Sus aspectos en las distintas regiones del Pas Vasco
de los orgenes a nuestros dias,
14. Organizacin Social, Contenido de la democracia vasca. Sentido de la igualdad. Reaccin
contra los intentos feudales de los Parientes Mayores. Nobleza universal.
15. Los Elementos Disociativos. Oacinos y Gamboinos. Agramonteses y Beamonteses.
Sabeltzuris y Sabelgorris.
16. El Pueblo. Perodo romano, visigodo y rabe. Luchas y vicisitudes. La unidad. Sancho el Mayor.
17. instituciones Estatales. Ducado de Vasconia. Orgenes y trayectoria histrica.
18. Reino de Navarra. Sntesis histrica de su grandeza y miseria.
19. Seoro de Vizcaya. Estados de Guipzcoa y lava. Caracteristicas de los mismos. Separacin
y relaciones mutuas.
20. Laburdi, Zuberoa y Benabarra. Desarrollo propio. Sus vinculaciones con Francia e Inglaterra y
sus relaciones con los estados vascos del sur.
21. Fueros Vascos. Su aparicin escrita en las distintas regiones de Euzkadi. Carcter fundamental
de los mismos,
22. Derecho Vasco. Instituciones bsicas del mismo. Origen. Sentido y valor de las mismas.
23. Organismos Forales. Las Juntas Generales. Organizacin y funciones. Otros organismos
gubernativos. El regimiento y la diputacin general.
24. Vida Internacional. Los tratados con Inglaterra y la expansin martima y comercial vasca.
25. La Edad Media, Las llamadas uniones a Castilla, Su sentido y alcance. Intentos de absorcin.
Cuatro glorias patrias.
183
28. Los Vascos en la Literatura castellana. Desde Gonzalo de Berceo a nuestros das.
29. El Euskera. Bernardo de Etxepare, primer poeta en lengua vasca. Estudio de su obra.
30. Pedro de Mular. El ms grande prosista euskriko. Estudio de su Gero. 3 LE Principe de Viana.
Imagen de su patria y hombre del Renacimiento.
32. La Contrareforma. Ignacio de Leyla y Francisco de Xsbier.
33. Descubrimiento de Amrica. Los vascos en el mar. Balleneros y bacaladeros.
Embarcaciones e invenciones martimas vascas.
34. Los Grandes Navegantes. Juan de la Cosa, Sebastin Elcano.
35. El Derecho de los Pueblos Recin Descubiertos. Francisco de Vitoria y su doctrina de derecho
internacional.
36. Los Misioneros. Antxieta, Azpilukuelas, ele.
37. Los Civilizadores. Juan de Zuinanaga.
38. Los Fundadores, tala, Caray, Zabala...
39. Los Colonizadores. Urdaneta y Legazpi y la empresa de Filipinas.
40. Los Primeras Voces de la Libertad. Alonso de Ercilla y Lope de Aguirre.
41. El Siglo XVHI. Desarrollo martimo. El Consulado de Bilbao. Proyeccin internacional de sus
Ordenanzas.
42. Empresas Comerciales Ultramarinas. La Real Compaa Guipuzcoana de Caracas. Sntesis de
sus actividades y realizaciones,
43. Empresas Culturales. La Sociedad vascongada de Amigos del Pas. Peaflorida y sus
colaboradores. Alcances de la obra realizada.
44. Siglo XIX. La revolucin francesa y su repercusin en la Euskadi continental. Prdida de las
libertades de estas regiones.
45. La Gesta Napolenica, Resultados de la misma en el norte y en el sur del pas.
46. La Cuestin Dinstica Espaola. La Primera Guerra Carlista. Sentido de la intervencin vasca.
Zumalacrregui, el genio vasco de la guerra.
47. La Segunda Guerra Carlista. Sus caractersticas. Prdida de las libertades. Pervivencia.
48. Jos M.* de Iparraguirre, El bardo errabundo.
49. La Reaccin en el Pais. Fueristas y Euskaleniacos, Intentos culturales y polticos de
renacimiento. Arturo Campin.
50. Sabino de Arana Goiri, Raices, vida, obra y doctrina.
51. Renacimiento Vasco, Aspecto cultural. Congreso de Esludios Vascos. Sociedad de Estudios
Vascos. Academia de la Lengua.
52. La Poesa pica. Precedentes. El poema Euskiilditnuk de Nicols de OrmaeUea.
53. La Poesa Popular. Los bertsolaris. El bardo Fierre de Etxahun.
54. La Lrica. Precedentes y contemporneos. Xabier de Lizardi y su obra.
55. El Teatro. La Pastorales. Intentos modernos de creacin.
184
de Amezaga aparece reiteradamente mencionado como una de las principales figuras de!
periodismo y la traduccin en el exilio, figuras clave del periodismo vasco en Argentina son
Vicente Amezaga, Pedro Basaldua, Issac Lpez Mendizabal, Nicomedes Iguala, Isidoro de
Faguaga, Andrs M."rujo. Pello M." rujo. Manuel rujo, etc. (...) Entre las figuras ms destacadas
del periodismo vasco en Venezuela caben ser mencionados los nombres de Martn Ugalde.
Eugenio Imaz, Juan Daniel Garca Bacca, Pelay Orozco, Daniel Barandiarn, Kepa de Derleano y
Basterra, Alberto Elosegui, Vicente Amezaga, Juan Manuel Polo, Hess Basaez. ele. (...) En lo
que se refiere a Uruguay, (...) Vicente de Amezaga es figura clave de! periodismo vasco en este
pas del cono sur americano. Ana Hermoso, Pilar Rodrguez, "El periodismo del exilio vasco", en La
Cultura del Exilio Vasco, 2 vols., I.A. Ascunce, Donostia, 1994. Vol. 2, pp.51-53.de Ornar
Kheyyam y las ltimas notas de sus lecciones de alemn, que tomaba en sus viajes de autobs
desde el trabajo en el Archivo Nacional a su casa de Residencias Country.
185
Capitulo 14.
186
Son mis manos las que quieren hablar, y pidindoles permiso, dicen, queremos
hablar de todo lo que hemos visto, odo y sentido en nuestra travesa, y queremos
hacerlo usando un lpiz, porque estos traen borrador, as podremos borrar aquello
que no sea agradable en esta travesa.
Porque somos nosotras las manos, quienes hemos sentido las manos de mi Ama y
de Aita, en mis primeros aos, en la placita Varela de la hermosa Montevideo, el
lenguaje de las manos de mi Aita tomando las mas. En una fotografa, reflejan un
mundo que solo nosotras entendemos.
Porque somos nosotras las manos, quienes hemos ledo y leeremos muchos libros,
pero mi primer libro Leoi Kumea, lo he ledo muchas veces con mis manos, hay
libros que se leen con las manos.
Porque somos nosotras las manos, las que hemos sujetado el manubrio de mi
primera bicicleta, con la cual iba orgulloso a el colegio de Montevideo; somos
nosotras, las que nos llevaban y nos dirijan por las calles, esa libertad que solo la
podemos entender nosotras las manos.
Porque somos nosotras las manos, las que hemos sentido las aguas del Atlntico
que mojaban las barandillas del barco que me llevo a Barcelona, nosotras
tocbamos las gotas saladas, creyndonos capitanes de mar, visitando muchos
puertos.
Nosotras vimos y nos sorprendimos del Pan de Azcar, desde su mirador, y nosotras
tocamos los vividos colores de Baha con sus 365 iglesias.
Porque somos nosotras las manos, quienes tocbamos la tierra del monte Ula, en
Donosti, cuando hacia excursiones, a veces escapndome del colegio, y hemos
tocado las gotas del mar en la desembocadura del ro Urumea, cuando las galernas
golpeaban.
Porque somos nosotras las manos , que hemos dominado las vibraciones de mi
primera motocicleta en Caracas, que se mostraba con su incipiente crecimiento
urbano, a travs de sus mltiples urbanizaciones, mayormente en sus alrededores,
creyendo nosotras descubrir remotas cuevas, nuevos caminos para m, pero eran
187
viejos caminos andados y desandados por mulas, que solas, saban llevar y regresar
con sus cargas ... Todo eso lo palpamos nosotras desde el manubrio; nosotras
tenemos imaginacin, guardamos recuerdos y por eso escribimos, y nos llegaban
los diversos aromas que nos regalaban las casas de campesinos con su cafecito
recin colados, con su molienda de caa en trapiches de altas chimeneas, caminos
salpicados de bodeguitas, sitios de encuentro, de aprovisionamiento y de las mas
exquisitas empanadas de carne molida, con su infaltable caf negrito; a nosotras,
las manos, nos gusta escribir de estas cosas sencillas, pero grandes para quien las
sepa entender.
Porque somos nosotras las manos que hemos sujetado el volante de mi primer jeep
en la Gran Sabana, por agrestes caminos de tierra rojiza de la mas antigua
formacin geolgica de la tierra, fuimos nosotras quienes tocamos esa tierra y a las
que nos invitaron a tendernos en el suelo en la noche a ver las estrellas en el cielo,
el mas lleno de estrellas, y constelaciones, dicen porque no hay contaminacin en
esas vastas sabanas, pero nosotras lo entendimos de otra manera, la distancia
entre las manos y el corazn es muy corta.
Porque somos nosotras las manos, que hemos visto las densas selvas de Guatopo,
encontrando antiguas haciendas cafetaleras abandonadas, con sus barracas para
peones y con su propia moneda para la compra de bienes dentro de ellas, en su
propia tienda, que aun conservaba los letreros despintados de lo que vendan, as
como de las estanteras de madera desvencijadas, pero con mucha historia de las
conversaciones, y sueos de aquellas personas, todo eso lo hemos tocado nosotras,
no hay sensacin como esa, palpar mas que tocar, una historia contada por los
muros, recubiertos por musgo, hiedras y races de la selva, pareciera que la selva,
le quiere dar otra vida abrazndolo todo.
Porque somos nosotras las manos, que hemos acompaado en muchos paseos a
Aita por los campos de golf de Caracas, entre las casas mas adineradas,
recolectando deliciosos mangos de esos rboles frutales trados desde la India, con
los que Ama hacia mermelada, esa mermelada en su sabor, tena las
conversaciones de Aita conmigo
Porque somos nosotras las manos, que hemos sentido la mano de mi hijo en paseos
desde la calle Iturrama, hasta la parte vieja de Pamplona, solo nosotras sabemos
mantener ese dialogo.
Porque somos nosotras las manos, que hemos visto, conocido, sentido y enamorado
a la mujer que amo, compaera de mi vida en Caracas, en un lenguaje que solo las
manos son capaces de decir, hacer y entender.
188
Porque somos nosotras las manos, que acampamos, con la compaera de mi vida,
solos los dos, los 31 de diciembre de cada ao, en los fros pramos de los Andes de
Venezuela, rodeados de frailejones, envueltos en mantos de la niebla, que todo lo
esconde, a unos 2 grados centgrados; somos nosotras las manos, quienes
padecemos del fro, pero otras manos nos dan cobijo, calor y amor. Esta sensacin
recoge una intimidad, que como un lenguaje solo se puede escuchar en la soledad y
silencio de estas montaas.
Mis manos quisieran tocar una obra en un piano imaginario, con sus 88 teclas, con
sus combinaciones infinitas, para dar cabida a todo lo que han visto, ledo, sentido y
escuchado, es tanto.... que a veces nosotros las manos, quisiramos borrar, reducir,
pero mi alma no nos da permiso para borrar, por que ella dice, que es muy fcil
deshacer ... lo difcil, es escribir sobre algo que deje huella.
Y a nosotras las manos, nos gusta al viajar ver, mirar a otra manos, hemos visto
otras manos, las manos de campesinos haciendo a mano las tejas de barro, sobre
sus propias rodillas para darle la forma que permita que toda el agua de lluvia
escurra, sobre los techos.
Y porque nosotras las manos, hemos visto otras manos, las manos de las doas de
los caseros y en pequeos pueblos, amasando la masa de maz, para hacer las
arepas,
Y porque nosotras las manos, hemos visto otras manos, las manos que ordean a
las vacas, con un cancionero muy particular para amansar. En una comunin muy
especial, pocos trabajos se pueden entender o hacer, a mano, si no lo
acompaamos de sensibilidad.
Y porque nosotras las manos, hemos visto otras manos, que recogen las cosechas,
solo a mano se puede hacer la recoleccin de ciertas cosechas en viales o en
campos de cultivo.
Y porque nosotras las manos, hemos visto a otras manos, tocar el arpa y el cuatro,
acariciando las cuerdas, solo como nosotros sabemos hacerlo. Nosotras al estar
muy cerca del corazn, sabemos que esa msica llega al corazn de aquellas
muchachas y muchachos, que se engalanan en las fiestas patronales de pueblo.
Y porque nosotras las manos, hemos visto a otras manos, las de una anciana que
desde muy nia aprendi a tejer en el telar de la casa paterna, hecho a mano de
madera local, y a cardar, tambin a mano, la lana de oveja, tradicin y costumbre
de muchos aos, en un pueblito de los Andes venezolanos,
189
Y porque nosotras las manos, hemos visto a otras manos, construir los bloques de
tierra cocida, secados al sol, como en panelas, as hacen sus casas de muros desde
tiempos de sus padres, y estos de sus padres, el lenguaje del orgullo de hacer sus
casas a mano, es lo que dicen sus rostros, sin necesidad de que ellos nos hablen.
Y porque nosotras las manos, hemos visto a otras manos, recoger los granos del
aromtico caf, cultivados a mano en frondosas montaas altas, caf de sombra,
as lo llaman, luego lo llevan a trillar a mano y luego lo secan, bajo al ardiente sol,
en los techos y patios de sus casas, esparcindolos, como querindolos barrer con
una especie de pala amplia, todo a mano, No hay cafecito negrito de mas sabor, que
aquel que en humildes fogones de lea, se cuela, con aroma del amor de las manos
que lo cosecharon y cuidaron de l. Ni detalle mas dulce que el azcar morena
extrada de la caa de azcar, as la llaman por su color; cafecito con papeln, as lo
ofrecen en humildes tacitas de peltre.
Y porque nosotras las manos, hemos visto a otras manos, ofrecernos cobijo y
alojamiento, en humilde casa de campesinos, sin mas inters que el ofrecer
amparo, cobijo y comida, ante un palo de agua, en plena montaa, que nos dej
varados en el camino, compartiendo en la cocina la cena que la doa de la casa
tenia preparada para ellos, nosotras, no hemos conocido cena mas deliciosa que
aquellas cachapas hechas a mano, por aquellas manos que podan contar muchas
historias en la dura vida de las montaas, habitadas por casas con paredes de
bahareque, humeantes por sus hornos de lea. Esas personas no nos conocan,
ahora nosotros si conocemos esas montaas con forma y calor humano.
Y porque somos nosotras las manos, quienes hemos sentido las manos de Ama y de
Aita, que nos acompaaron en nuestra travesia, desde mis primeros aos, en la
placita Varela, hasta el momento en las que ya las manos de Aita no estaban, vimos
y sentimos como las manos de Ama, sufrian, pero con temple, esas manos se
dedicaron a hacer una labor deliciosamente intima en honor y homenaje a su
compaero de toda su vida,
Y porque nosotras las manos, hemos visto a otras manos, las manos de Ama,
acometiendo la extensa labor de recoger, reordenar y preservar de este modo, y
para todos nosotros, todos los articulos de Aita, no publicados, dispersos en cajones
, que de otro modo se hubieran perdido, lo hizo en forma callada, sin esperar nada,
dentro de su dolor reciente, y encerrada en la bibiolteca de Aita. Nunca incluyo su
nombre o hizo alarde de esa labor, simplemente la hizo, Ese baul en que ella
encerro todo ese material ha servido como fuente o material para publicaciones de
todos nosotros sus hijos.
Y porque nosotras las manos y gracias a otras manos, las manos de Ama, nos han
permitido la Creacin del Unico sitio en Internet, que lleva el nombre de mi Aita,
como el mas completo homenaje, e hito, el cual permite la potencial difusion
internacional de su vida y obra, cerrando un ciclo que comenzo en 1901, siendo, de
referencia completa de su vida y su Obra, totalmente publicada en Internet,
Poesias, Articulos de Prensa, sus Libros, completando asi, y cerrando todo lo que se
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Y porque nosotras las manos queremos hablar, tomando un lapiz,.y solo escribir que
este homenaje en Internet, lo hemos hecho y dedicado en homenaje a Ama, sin
ella, este sitio en Internet, no hubiera sido posible.
Y porque nosotras las manos, no hemos tenido que pedir permiso a mi alma para
borrar, No hemos tenido que usar la goma de borrar, por que ella dice, que es muy
fcil deshacer ... lo difcil, es escribir sobre algo que deje huella.
Y porque nosotras las manos, sabemos que todo lo que se hace con las manos, es
el lenguaje que el alma tiene para hacer las obras del hombre.
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Esta descripcin relacionada con el mar enmarca nuestra estirpe vasca, que
incluye los vascos pioneros de la caza de las ballenas, nuestra fe cristiana, nuestros
antepasados fenicios, el hroe vasco que circund el mundo, nuestros antecedentes
paternos y maternos, nuestro abuelo materno y las experiencias de mis padres en
sus viajes hacia el exilio y m propia experiencia.
Todos los factores mencionados han trazado el camino de nuestra historia
familiar junto al mar, navegando ellos y yo por los mismos siete mares aunque en
diferentes pocas y en distintos buques. La vida de mis padres dos veces exiliados,
primero de la Guerra Civil Espaola y segundo debido a la Segunda Guerra Mundial,
y mas tarde viviendo como emigrantes en tierras ajenas ha sido una experiencia que
ha impactado mayormente nuestras vidas. Dejaron atrs todo lo querido y conocido
para salir a la deriva navegando por el mar buscando otros horizontes. Tanto el mar
como los barcos han sido de significativa importancia en la vida de nosotros. Y cada
uno de los viajes ha dejado una huella y una transformacin en nuestras vidas.
Aunque hay cinco ocanos en la tierra, Antrtico, Atlntico, rtico, Indico y
Pacifico, aqu nos enfocaremos en la experiencia de mis padres en su doble exilio
navegando en lo que yo llamo los siete mares que fueron por orden cronolgico, el
Mar Cantbrico, Mar Mediterrneo, Ocano Atlntico Norte y Ocano Atlntico Sur,
Golfo de Mxico, Golfo de Campeche y el Mar Caribe.
[
Navegando por los siete mares es una frase que ha sido usada por marinos,
y que se puede referir a navegar mucho o todos los ocanos del mundo. Para un
vasco es tan importante el Mar Cantbrico como los Pirineos que hacen de teln de
fondo en un paisaje con todas las tonalidades del verde, escarpadas costas de ras
cortas y sierras de hayedos y robles. Sus habitantes han sido durante siglos marinos,
labradores y pastores que hablaban una lengua sin parentesco con las conocidas y
cuyo origen hay que buscarlo en la leyenda ms que en la historia. Dicen que todo
comenz con Sugaar, uno de los personajes mitolgicos vascos, quien tuvo
amores con una bella princesa que viva en Mundaka. De esa unin naci Juan Zuria,
el primer seor de Bizkaia (Vizcaya). Pero, en realidad, los vascos, dicen algunos son
descendientes de la tierra: los euskaldunak. Un pueblo que conserv sus costumbres,
que no los consiguieron dominar los invasores, y que form un islote tnico. Ya en
el siglo XIV pescadores vascos llegaron hasta Islandia y Groenlandia y se instalaron
en la costa de Terranova y el Canad. De Guetaria era Juan Sebastin Elcano, el
primero que dio la vuelta al mundo, y de Zumrraga, Legazpi, conquistador de
Filipinas. Pero junto al pueblo marinero est el pueblo campesino. El casero sigue
siendo el eje de la vida campesina vasca. La agricultura, claramente minifundista, se
basa en el cultivo intensivo por lo que el aprovechamiento de la tierra es total. El
otro tradicional oficio vasco es el de pastor y, por lo general, eran propietarios de sus
rebaos. Cuando no poda ser as, emigraban. Muchos de ellos fueron a Estados
Unidos y Canad. La importante industria por la que es hoy da conocido el Pas
Vasco llegara, junto al comercio, a principios del siglo XX.
Pero dejando a un lado la parte del campesino y de pastor parte primordial de
la cultura vasca haremos ms nfasis en todo lo relacionado al mar.
LOS MARES- El anciano mar con sus puertos y playas en sus costas contina
ofreciendo atesorados recursos; grandes industrias pesqueras comerciales,
diversidad de vida martima, playas que pueden ser desiertas de arena blanca
baadas por aguas turquesas, o aquellas donde el mar embravecido rompe sobre las
rocas que se encuentran a lo largo de la playa desierta y medio salvaje. Tesoros que
arrojados por las olas llegan a sus orillas que ofrecen descubrimientos inimaginables
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y en ocasiones por
normalmente eran
condena a galeras
incluso Miguel de
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enormes distancias. Tal fue el caso, por ejemplo, del clebre barco-dragn de los
vikingos.
Los llamados gigantes del mar como el Lusitania, junto con su gemelo el
Mauretania, no slo destacaron por su velocidad, sino por las comodidades a bordo,
llegando a ser sus salones interiores tan lujosos como cualquier instalacin de
renombre en tierra. Pertenecientes a la naviera Cunard, bien podra decirse que
iniciaron la edad de oro de los grandes transatlnticos, al incitar a las dems
empresas navieras a la competencia por lograr la supremaca en cuanto a lujo,
tamao y velocidad de sus respectivos barcos.
En nuestros das los buques de pasajeros se han transformado en hoteles
flotantes con cmaras confortables, comida variada bien preparada y abundante, y
con modernos sistemas de comunicaciones. Pero con la llegada de los aviones
boeing 707 las compaas navieras han sufrido y ahora los barcos son usados ms
bien como cruceros, pero pocos como medio de transporte entre continentes, y con
ello la historia familiar martima termina, porque nuestros hijos o nietos miraran a
estos barcos mercantes transportadores de libertad y de exploracin como algo de
un pasado lejano.
EPOCAS PRE-CRISTIANA Y CRISTIANA- Segn dice el estudio y resultado de m
ADN los fenicios eran parte de mis lejanos antepasados. Eran un grupo de individuos
que emigro de la Pennsula Arbiga a la tierra de Canan situada entre Egipto y Siria.
Para 1200 a.C los fenicios controlaban la estrecha franja de tierra que bordeaba el
Mar Mediterrneo en el norte de Canan, donde construyeron numerosas ciudades y
villas. Todas ellas estaban unidas una y otras por la cultura, pero gobernadas
independientemente como ciudades estados separados. Los fenicios eran dueos del
mar. Su economa se basaba en el comercio. Y en vez de mover sus mercancas a las
tierras en caravanas masivas, ellos construyeron grandes barcos de vela y muchos
historiadores estn de acuerdo que ellos viajaban a tierras distantes como a Gran
Bretaa y Espaa. Esto era una tremenda hazana considerando el nivel de tecnologa
en aquellos tiempos.
La primera civilizacin occidental que se conoce que haya desarrollado el
arte de la navegacin fueron los fenicios, acerca de 4000 aos (2000 a.C.). Los
marinos fenicios realizaban la navegacin usando mapas primitivos y observando el
sol y las estrellas para determinar la direccin.
Eran los ms habilidosos
constructores de barcos y navegantes de su tiempo. Los fenicios han sido
reconocidos como muy buenos marinos, quienes no slo construyeron barcos
mercantes capaces de transportar cargas considerables, sino tambin buques de
guerra mayores y ms efectivos que cualquiera de los fabricados por sus
contemporneos, los egipcios y los egeos. El talento naviero de este pueblo se
desarroll a la par de su actividad comercial, pesquera y, en menor medida,
guerrera. Los barcos fenicios estaban hechos de maderas resistentes, como el cedro,
pino, encino y ciprs. Llegaron a tener barcos muy grandes, que tambin
aprovechaban la fuerza del viento por medio de velas rectangulares. La construccin
ms significativa de los fenicios fue el buque de manga ancha que utilizaba velas en
vez de remos y proporcionaba un espacio para el
cargamento mucho mayor que las galeras estrechas.
Los barcos fenicios navegaron por el mar
Mediterrneo y otros ocanos hasta las islas
Britnicas (para comerciar con estao), y tal vez
tambin se dirigieron hacia el Sur, a lo largo de la
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hiciera Coln en 1492. Muchos investigadores tambin sostienen que al menos una
veintena de hombres partieron del golfo de Vizcaya y Bayona en 1412 y arribaron al
territorio de Terranova. Esto no ha podido ser demostrado arqueolgicamente, pero
estas hiptesis se funda en que fueron los vikingos los que introdujeron en Euskal
Herria la tcnica de construccin naval que utilizaron los balleneros vascos y que se
diferenciaba de forma clara de la utilizada tpicamente en el Cantbrico. Este hecho,
junto a la suposicin de que fueron los vikingos los que descubrieron Amrica, hace
crecer la leyenda de que antes de Coln, los vascos ya haban realizado expediciones
a Amrica.
Otra historia asociada a los balleneros vascos, pero que tampoco se ha podido
demostrar, cuenta que es posible que la desaparicin de las ltimas colonias vikingas
en Groenlandia sobre el siglo XV pueda ser a posibles ataques de balleneros piratas
vascos.
Por otro lado, existen otras muchas historias demostradas, tal como la que
cuenta que sobre el siglo XV unos exploradores franceses que se encontraban en
Terranova, se toparon con unos indgenas que les saludaban Apezak hobeto!. No
fue hasta un tiempo ms tarde cuando un marinero vasco descubri que era euskera,
y que resultaba que exista la costumbre entre los marineros vascos de responder a
la pregunta Zer moduz? (Qu tal?), con la frase: Apezak hobeto! (Los curas
mejor!).
JUAN SEBASTIAN ELCANO- Un gran vasco Juan Sebastian Elcano fue el gran
capitn, navegante y explorador vasco con
amplios conocimientos nuticos que naci en
Guetaria,
Guipuzcoa
(1486-1526).
Este
pintoresco
puerto
ballenero
desde
la
antigedad a orillas del Mar Cantbrico. Este
famoso marino es recordado por ser el primero
que completo la vuelta alrededor del mundo. Al
morir Ferdinando Magallanes en las Filipinas
quedando Elcano como capitn del barco
Victoria llegando con 17 hambrientos y
deshidratados, y cadavricos hombres al puerto
de Sanlcar de Barrameda, al noroeste de la provincia de Cdiz, de donde salan los
barcos para evangelizar las Amricas. Esta representacin se celebra cada 4 aos (6
de agosto) en el Puerto de Guetaria para conmemorar la llegada de Juan Sebastian
Elcano tras su circunnavegacin a travs del mundo en la Nao Victoria. En el siglo
XVI, despus que el vasco Juan Sebastin Elcano efectuara la primera
circunnavegacin a la Tierra, el comercio martimo transatlntico aument
considerablemente, lo que incentiv la investigacin y la creacin de nuevos tipos de
naves, ms apropiadas para largas travesas y para soportar los rigores de la mar en
forma continuada. As fue como apareci el bergantn barco de dos mstiles
extremadamente giles y rpidos apropiados para viajes entre continentes.
ANTECEDENTES -Mis antecedentes paternos, los Amezagas, siguieron una ruta
martima con los fenicios por miles de aos desde lo que hoy en da es Lbano hasta
llegar al puerto de Algorta, lnea gentica que la he podido trazar por medio del test
de ADN 10.000 aos atrs.
200
Tambin el ADN dice que mis antecedentes, por parte materna, los ubicamos
en Ucrania, Sur de Rusia junto a los escitas llegando a los Pirineos y viviendo en la
costa Cantbrica desde el siglo XVIII. Mi abuelo materno, Inocencio Iribarren naci
en Motrico, un puerto de mar situado a orillas del mar Cantbrico en el lmite con
Vizcaya Pas Vasco. Con la tradicin marinera y pescadora y la economa de este
pueblo est ligada al mar. Con su hermoso puerto la pesca ha sido su principal motor
directa o indirectamente, suministrando la materia prima para las fbricas
conserveras. La industria casi exclusiva en este pueblo es la pesca y sus industrias
derivadas de las que los escabeches y salazn de anchoas son las principales, una
fbrica de hilados y tejidos de yute, otra de armas y seis molinos. Creciendo junto al
mar decidi hacer de el su carrera. El era
maquinista naval, tripulaba, controlaba y
reparaba las maquinas de los barcos como
trabajo.
Ver el modelo del barco de mi
abuelo.
Aunque mi abuelo era un enamorado
del mar y le gustaba navegar por el bravo
mar del Cantbrico, pero se dio cuenta que el
era no era apto para esta carrera porque se
mareaba al vaivn de las olas, y decidi que
si no poda viajar en su barco, hara su
futuro en algo relacionado al mar. Era a principios de siglo, estaba casado y tenia dos
hijas. La familia decidi dejar Motrico y comprar unas tierras en Erandio pueblo
tradicionalmente navegante y marinero con gran actividad pesquera, siendo la
construccin naval uno de los medios de vida ms importante en aquellos momentos.
Era el lugar indicado para levantar su negocio que lo llamara Talleres de Erandio a
las orillas del Ro Nervin. Se dice que un pueblo que navega, que se amplia y se
afama en el mar, tiene que ser a la fuerza un pueblo que construye barcos y as
sucedi con mi abuelo a la vera del Ro Nervin, en las cercanas de Bilbao. Fue una
industria exitosa dedicada a la construccin de cascos de barcos y gras.
El Ro Nervin fue el principal escenario de mis abuelos, mi madre y el mo.
Este ro tiene 72 kilmetros de largo y nace en la conjuncin de Burgos y lava y su
corriente va de sur a norte. A los pocos kilmetros de su nacimiento forma un
espectacular salto de 300 metros para continuar por el valle de Delica en direccin
noreste para bajar hasta entrar en la provincia de Vizcaya a travs de la ciudad de
Ordua, en el municipio de Basauri, y aqu confluye con el ro Ibaizabal y juntos
dividen el resto de la comarca del Gran Bilbao. Bilbao naci donde la ria comenzaba a
ser navegable y exista un puente que la cruzaba dividindolo en dos a la ciudad. El
ro cruza la capital bajo el nombre de ria de Bilbao hasta su desembocadura en el
Mar Cantbrico, en Santurce, con un recorrido de 15 kilmetros. Este ro desarrollo
una gran actividad comercial siendo el puerto ms importante de toda la zona norte.
Su residencia la tena en Las Arenas, Getxo, en La Casa Grande como la llamaban
en el pueblo, en donde nacieron tres hijos ms.
Reconectando mis experiencias en los diferentes pases en ciudades con
hermosas playas que me ha tocado vivir. Aun en mi mente tengo la visin de las olas
que suavemente con su vaivn me mecan continuamente mientras a la orilla de la
playa jugaba con las conchas marinas nacaradas escuchando la msica del mar como
la llamaba Oscar Wilde. De jovencita a veces me senta suspendida entre las gotas
de agua e hipnotizada miraba el horizonte que con esa delicada casi imperceptible
lnea donde el azul se encuentra con el azul. Mis primeros pasos los di en la playa de
Biarritz, de nia visitaba las playas de Las Arenas, Ereaga en Algorta y la playa
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acorazado Espaa, por el crucero Almirante Cervera y por el destructor Velasco a los
que se aadieron una eficacsima flotilla de naves auxiliares.
Mis padres embarcaron en Santander cruzando el Mar Cantbrico hacia su
primer exilio a mediados de junio del ao 1937. Y en este mar los enemigos eran
barcos de los nacionalistas espaoles. El gobierno vasco sali de Santander en un
hidroavin el 14 de agosto del 37 a Bayona creando el Consulado de Euskadi
(Consuelo Soldevilla Oria, Concejala de Cultura del Excmo. Ayuntamiento de
Santander).
Mi padre nombrado por el Gobierno Vasco fue como Director de la Colonia de nios
en St. Jean de Pied-de Port, Francia. El estaba a cargo de 500 nios que embarcaron
junto a mi madre con 23 maestras, 2 cocineros y ayudantes, 1 medico, 2
enfermeras, 3 sacerdotes y otros ayudantes, subieron presurosos al barco mercante
Ploubazlanec (foto) emprendiendo su primer viaje al exilio hacia el este por el Mar
Cantbrico. Este buque les llevara a Bayonne, Francia. Al poco del barco zarpar con
terror vieron se les acercaba el enemigo. El capitn francs avis a los hombres para
que se escondieran inmediatamente. Mi padre, el mdico y tres santanderinos
bajaron a la bodega. Era el crucero Almirante Cervera que les intercept para
cerciorarse de que los pasajeros eran solamente mujeres y nios, y que no haba
hombres. El barco Almirante Cervera fue un crucero, lder de su clase, perteneciente
a la Armada espaola. Este crucero era una unidad definible como moderna pues fue
entregada a la Armada en 1928. Contaba con una ametralladora y 12 tubos
lanzatorpedos. En julio de 1936, al inicio de la Guerra Civil, el Almirante Cervera
estaba en dique seco en El Ferrol y qued en poder de la marinera destinado a la
Repblica, lo que le impidi tomar parte en las primeras operaciones junto con sus
gemelos. El da 21 fue asaltado por oficiales y marinos afectos a los alzados, lo que
lo dej en manos del bando franquista.[] Esta nave omnipresente en las costas
vascas as como en las de Santander y Asturias y dada la impunidad con que minaba
puertos y caoneaba poblaciones costeras, como Gijn, Santander o la base de
submarinos republicanos en Portugalete en el bando republicano recibi el mote de
el chulo del Cantbrico y en el bando nacional el de Glorioso Crucero.
El capitn del Ploubazlanec neg el hecho de la presencia de hombres abordo
con tanta firmeza y eficacia que le creyeron y les dejaron proseguir el viaje. Dos das
despus el Ploubazlanec lleg al industrial y comercial puerto de Bayona, Francia,
ciudad fundada por los vikingos en el ao 842 a las orillas de ro Nive
Desembarcaron en este precioso puerto contentos de estar fuera del alcance
de Franco y fueron a la estacin de tren que les llevara a St. Jean Pied de-Port, la
vieja capital de la Baja Navarra, despus de una hora de viaje llegaron al pueblo.
Emprendieron una caminata de un kilmetro y arribaron al fuerte medieval, llamada
La Citadel situada en lo alto de un cerro en la vieja parte de la ciudad, a la derecha
del ro Nive. Mientras caminaban en la calle les gritaban rojos porque para el resto
del mundo ellos eran los que trataron de vender Espaa a la Rusia Comunista. En
este fuerte medieval mis padres vivieron seis meses despus de los cuales mi padre
fue nombrado Representante personal del Ministro de Justicia, Don Jess de Leizaola
en Barcelona.
Por cuatro meses vivieron en una situacin insostenible donde prosigue el
avance nacional y aviones estalinistas bombardean la ciudad mi padre abandona
definitivamente Barcelona y va a Paris con el cargo de Secretario del Ministro de
Educacin, Jess de Leizaola y en Paris se rene con mi madre que ahora resida en
esta ciudad viviendo junto a su hermana Juli en vsperas de dar a luz su primer
retoo.
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frica y Egipto para llevar a cabo los grandes edificios para los emperadores
romanos. Pero la gran mayora de los barcos eran ms pequeos y para llevar carga
mezclada. Pero no todos los contactos eran polticos y econmicos.
Tambin se difunda a travs de este ocano la religin y las ideas
transformando el Mediterrneo con las influencias de la religin judaica, presente en
cada esquina del Mediterrneo con las consiguientes sinagogas, el Islam no lejos del
Mar Rojo con sus mezquitas y el Cristianismo que ganaban terreno cuando
Constantino puso nfasis en la identidad cristiana del Imperio Romano.
El culto a los santos suavemente se apodero de los dioses locales con la
influencia de Agustn de Hipo telogo del norte de frica y el Acrpolis de Atenas y el
Partenn de Atenas fue desplazado por ermitas y santuarios e iglesias dedicados a la
Virgen Mara que se remitira en siglos despus en los continentes americanos.
El Mediterrneo ha sido un foco permanente de tensiones. Con las cruzadas,
el desarrollo del Islam, las incursiones turcas en Constantinopla y al sur de Italia y la
expulsin de los musulmanes de Espaa por los Reyes Catlicos hacen que La
mayora de los moros exiliados se instalan en las costas del norte de frica
clamando justicia por su destierro, su derrota y por haber sido humillados y
desposedos por la monarqua espaola. Juran vengarse. En 1500 la guerra corsaria
berberisca es un hecho. Adems del beneficio econmico buscan una religin de
venganza. Fue tambin un triste escenario de cuantiosas muertes por guerra y
epidemias. La peste bubnica; La Reconquista de Espaa con la expulsin de los
musulmanes que haban invadido la Pennsula Ibrica 700 aos atrs viniendo desde
frica y cruzando el Estrecho de Gibraltar, las tres Guerras Pnicas entre Roma y
Cartago, dos principales potencias del Mediterrneo de la poca en 264 a.C y 146
a.C., Napolen en Egipto venciendo a los Otomanes; las aventuras de Marco Polo, y
piratas.
Tres devastadoras plagas, enfermedad infecciosa a lo largo de un rea
geogrficamente extensa a lo largo de la historia. La segunda plaga llamada la Peste
Bubnica (1347-50) entr en Europa por dos puertos Marsella y Constantinopla, a
finales de diciembre de 1347. Apareci en China en 1330 y llego a Europa 17 aos
mas tarde por la ruta de la pennsula de Crimea (antigua cuna de los escitas) llevada
por el ejercito de mongoles cuando invadieron la zona. Los que huyeron la ciudad en
barco la llevaron consigo. A los seis meses la epidemia haba cubierto toda Italia,
Francia y la tercera parte del este de Espaa. De puertos franceses la enfermedad
cruzo a Inglaterra durante el verano de 1348, de Inglaterra fue a Escandinavia a
finales de 1349. Despus de 1350, esta particular plaga volvera a Europa una y otra
vez por los prximos 300 aos.
Europa nunca lleg a ser la misma. Destruy un tercio de la poblacin
cuando arras a travs del Mar Mediterrneo. La peste es causada por la bacteria
Yersinia pestis que se alberga en las pulgas con la ayuda de la rata de campo. Fue
llevada al oeste por el ejrcito mongol que asedio Crimea. La ruta por mar a bordo
de los barcos infectados con ratas se esparci por todo el Mediterrneo (Robert P.
Clark).
Se cree que su comienzo fue en la India y brot en la China y se fue
esparcindose por toda la Ruta de la Seda. Esta ruta no era un solo camino sino una
red de rutas comerciales de tierra y agua que conectaban China con el Mediterrneo
oriental y casi todos los imperios entre estos y aunque la fecha de la inauguracin es
de 200 a. C partes de esta ruta estaban abiertas por lo menos 2000 atrs.
Era un camino estril de estepas que parece prohibido con barrera ms que
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un camino acogedor. Por esta ruta caminaban las ideas poltica, fe religiosas, el
budismo de la India fue a la China, el Islam de Arabia a la India, artes, moda que
eran intercambiados a los largo del camino. Los chinos reciban productos como
cristal, uvas y vino, lana, algodn, marfil, caballos grandes y papiros a cambio de lo
que los europeos reciban como seda, te, jade, melocotones, albaricoques, peras,
porcelana, joyas, objetos de arte y especies como pimienta, canela, y clavo de olor.
Y esta anciana ruta cubra 5000 kilmetros por la que cruzaba en caravanas
de camellos, burros y caballos grandes que llevaban a comerciantes, peregrinos,
inmigrantes, refugiados, soldados, contrabandistas y aventureros y seguan a travs
del mar por barco para llegar a Europa. Debe su nombre a la mercanca mas
prestigiosa que circulaba en ella, la seda, cuya elaboracin era un secreto que solo
los chinos conocan, porque era un tejido que estaba reservado al principio para los
miembros de la familia Imperial China. Era un producto de lujo muy apreciado por
los comerciantes debido a textura y brillo. El mas famoso de los viajeros de la Ruta
de la Seda era el comerciante cristiano de Venecia, Marco Polo que con su libro
introdujo a los europeos Asia Central y la China.
Un importante pasajero de este mar fue el apstol Pablo de Tarso (2 a.C.-66
d.C.). Fue excepcional misionero y escritor de la iglesia naciente. Su verdadero
nombre era Saulo. Fue enemigo de la nueva religin pero, milagrosamente
convertido, recibi de San Pedro el mandato de predicar el evangelio y fue de los
primeros y mas ilustres propagadores del cristianismo en el Asia Menor, Grecia y
Roma donde muri decapitado.
El Mediterrneo cambi de poderes con expansin de comercio y barcos
mejores equipados, especializados como los usados durante la guerra. Y lo que
muchos siglos antes se hacia viajando en caravanas por tierra lentamente, ahora la
velocidad en las comunicaciones y el comercio se duplicaba por mar, y con ello la
piratera progres.
Los piratas se localizan all donde hay trfico de mercancas y en la
antigedad las rutas comerciales se situaban en el Mediterrneo. Ellos navegaban en
barcos pequeos y manejables como los de pesca para poder navegar en aguas poco
profundas y esquivar a sus perseguidores y cuando no tenan barcos para abordar,
saqueaban pequeas poblaciones de la costa. Y los pueblos para defenderse de la
amenaza pirata construyen atalayas y torres de defensa. Piratera era un saqueo
organizado martimo tan antiguo como la navegacin misma. Atacan en aguas
internacionales con el propsito de robar su carga, exigir rescate por los pasajeros,
convertirlos en esclavos o apoderarse de la nave misma. (David Abulafia, ed.)
Al Mediterrneo lo baa ros importantes como el Nilo, el ro ms largo del
mundo que empieza en una de las ms pequeas nacin de la tierra. En la cima de
Burundi, frica tropical y tambin es el ro mas importante por el nacimiento de las
civilizaciones a sus orillas. Moiss nos dice xodos 2 fue salvado de las aguas de este
ro. Toda la riqueza de la ciudad ms grande de frica como es el Cairo se debe al
ro. Despus de este ro recorrer 7000 kilmetros pasando por siete naciones, en
Nubia se sumerge en un mundo faranico de las pirmides, sarcfagos y templos
llegando finalmente a la mtica Alejandra sucumbe en el Mediterrneo (Geoffrey
Moorhouse). Cerca de Alejandra en la isla de Pharos (nombre que dio origen a la
palabra faro) en el siglo III a. C. fue construida una gigantesca torre para servir
como punto de referencia del puerto y como faro con una altura entre 200 y 350
metros. Fue una de las estructuras hechas por el hombre mas altas por muchos
siglos de altura y el gran edificio ocupaba 300 habitaciones, y tenia una hoguera que
estaba encendida da y noche y en la parte mas alta un gran espejo de oro reflejaba
207
la luz del sol durante el da y de noche la luz iluminaba una distancia de cincuenta
kilmetros. Fue daado por dos terremotos
Cuando el canal de Suez fue inaugurado (1869) fue un evento muy
importante en la historia del Mediterrneo porque une el mar Mediterrneo con el
Mar Rojo entre frica y Asia a travs de este canal, que une con la pennsula de
Sina. Anteriormente los barcos tenan que circundar a frica para llegar al Mar Rojo.
El 10 de junio de 1940 con la declaracin de guerra de Alemania contra
Francia e Inglaterra, el Mediterrneo se convirti en rea de batalla ya que Alemania
e Italia empezaron una campaa en contra al poder ingls en esta regin controlando
los dos pasajes al mar; el Estrecho de Gibraltar al oeste y el Canal de Suez al este.
Despus de que Francia cayera en poder alemn la Marine Nationale en el
Mediterrneo se convirti en la naval del gobierno francs de Vichy y ello resultaba
una amenaza grave para la naval britnica.
Estando pasando el verano en Biarritz el
14 de junio de 1940 los alemanes, aliados de
Franco, entran en Paris y con la ocupacin
alemana la vida de mi padre corra peligro y
decidi con pena abandonar el pas, tarea que no
era fcil en aquellos das. Como el gobierno
Frances de Vichy controlaba el pas al sur de la
lnea de ocupacin alemn, los refugiados tenan
que salir del nico puerto disponible: Marsella.
(Ver mapa.) Mi padre consigui milagrosamente
el pase alemn para salir de Biarritz por tren a
Marsella. Pensando mi madre estar junto a el
hasta que embarcara se le uni al poco tiempo
despus. Reunidos en Marsella se dieron cuenta
que los hombres podran embarcar con sus
esposas y familia y lo hicieron saber a mi ta esperando ansiosos que ella nos trajera
para embarcarnos con ellos, pero desgraciadamente no pudo ser. Dejndonos en
Europa se embarcan para Amrica. Mi hermana Begoa tena un ao recin cumplido
y yo de dos aos y medio.
En Marsella pasaron tres meses de hambre y fro, hasta que consiguen
embarcar. La navidad fue muy triste para todos y para mis padres ms por nuestra
ausencia. Finalmente el 16 de enero de 1941, 17 meses despus de empezada la
Segunda Guerra Mundial, embarcaron hacia Dakar, Senegal, frica, con ruta a
Buenos Aires, Sur Amrica, pas de su segundo exilio.
208
Ploubazlanec
Quanza
Alsina
Rio de la Plata
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210
211
padres trataron de cruzar sin saber todo lo que estaba sucediendo en estos
peligrosos tiempos. (Martin W. Sandler)
TERCER BARCO- QUANZA, 31 DE OCTUBRE DE 1941- El 31 de octubre de 1941
embarcan en Casablanca en el buque portugus Quanza (diez meses despus de
haber embarcado en el barco francs Alsina en Marsella), ech rumbo al Atlntico
norte y sigui un derrotero marcado por un mando naval ingles para evitar en lo
posible a los submarinos nazis. Juan Marichal, historiador y ensayista canario
reflexiona en su Itinerario biogrfico de un isleo octogenario.
Este buque les llev desde Casablanca,
frica a las Islas Bermudas, Veracruz, Mxico y
finalmente a la Habana, Cuba. En este barco
como en el Alsina los pasajeros iban en cabinas
separadas, mujeres y hombres que no tenan
familia, y juntos los que tenan a ella para
ahorrar espacio. Tanto el barco como las cabinas,
el servicio y la comida eran muy buenos, aunque
todos tenan los nimos muy tensos. Pronto
despus de zarpar el barco de Casablanca surgi un acontecimiento feliz. El
nacimiento de un bebe al cual mi madre hizo de partera, pues el medico con el andar
del barco se mareaba y el desde una cama le daba ordenes a ama que hacer. Y
pronto sin ningn contratiempo naci una preciosa nia que le llam Aintzane.
Despus de diez das de travesa muy buena el Quanza ancl en las aguas de
color turquesa de las islas Bermudas. Este archipilago formado por 120 islas
rodeadas de cristalinas aguas y adquiri importancia como base militar debido a su
posicin estratgica en el Ocano Atlntico y era usada como base en contra de los
submarinos alemanes durante la primera y segunda guerra mundial. Era un
importante centro de espionaje. Anclaron en el puerto de Hamilton donde el control
britnico les detuvo por dos das. Los britnicos les hicieron toda clase de
interrogacin sobre su actuacin en la guerra civil a mi padre y otros vascos,
despus del cual terminado le aseguraron a Ma. Teresa Aguirre que su hermano, el
presidente vasco, Jos Antonio Aguirre estaba a salvo. Y siguieron la travesa. Ahora
camino a Veracruz, Mxico, el barco hizo su curso entre las islas Bahamas y el estado
sureo de Estados Unidos, la Florida. Ante si por vez primera vieron tierra
americana, ms especficamente Palm Beach, en el estado de la Florida. Una visin
que mi padre nunca olvidara y al que dedico un poema llamado Palm Beach, la
parte ms al este de la Florida. Ver aquellos lujosos yates en bordando espumas no
lejos del barco, de esta ciudad de clima tropical, idlico para vivir, la magnificencia
que se admiraba en los edificios que marcaban la lnea de la costa; el bienestar, la
abundancia, la alegra de vivir todo, opulenta extravagancia esta al orden del da
todo ello bajo la gloria del sol de la Florida. As lo expres mi padre.
212
PALM BEACH
Amrica por fin, la ansiada orilla
durante largos meses tan codiciada
acaricia a mis ojos, coronada
Frente al barco, en la playa, la ola humilla
su poder, hecha espuma nacarada,
y gzase la mar enamorada,
tal riqueza en copiar y maravilla
Veloces gasolinos elegantes
pescando pasan. Brilla el sol dorado;
vense a Vida y Placer doquier triunfantes
Y al pensar en la Europa que he dejado
todo ruina y dolor y sangre y luego,
creo bien que he arribado a un Mundo Nuevo.
15 de noviembre de 1941
BATALLA DEL ATLANTICO 1939-1945- La batalla por el control del Ocano
Atlntico fue una de las ms importantes luchas y la ms larga de la Segunda Guerra
Mundial, llamada as por el Primer Ministro britnico Winston Churchill. La Batalla del
Atlntico comenz en 1939 y dur hasta el final de la guerra en 1945 con la derrota
de Alemania. Sin las armas y suministros que llegaban a travs del ocano desde
Estados Unidos, Gran Bretaa perdera la guerra. Winston Churchill dijo que la
Batalla del Atlntico era la nica cosa que siempre me daba miedo. Mas tarde se
hizo crucial para Estados Unidos tambin porque sus armamentos tenan que cruzar
el ocano para poder luchar en contra Alemania y detener la agresin de Hitler.
Como resultado la Batalla del Atlntico fue una de las mas largas y mas complicadas
de la segunda guerra mundial.
El primer ataque de esta campaa en el Atlntico ocurri el 3 de septiembre
de 1939 cuando el submarino alemn U-30 torpede el barco britnico Athenia que
llevaba 1,100 pasajeros. Se perdieron 120 vidas. Los submarinos alemanes eran
buques capaces de navegar bajo el agua adems de la superficie y llevaban una
plataforma para lanzar aviones de ataque martimo y para servir de
aprovisionamiento para otros submarinos.
Los submarinos alemanes tenan directo acceso al Atlntico cuando cayo
Francia en la primavera de 1940, ya que Alemania usaba las orillas del nuevo pas
conquistado proveyendo mas fcil acceso a las aguas usadas frecuentemente por los
convoyes aliados que eran un grupo de buques, y los ataques U-boat (abreviatura
en alemn para barco debajo del agua) aumentaron as como la produccin de ellos.
Los submarinos alemanes tuvieron un efecto devastador en la Batalla del Atlntico
intentando cortar las rutas de suministro britnicas al hundir ms barcos de los que
los ingleses podan reemplazar. Estas rutas eran vitales para la alimentacin y la
industria britnica as como para el armamento estadounidense. Ellos empleaban lo
que se llamaba manada de lobos que eran un grupo de submarinos que navegaban
213
juntos y atacaban los barcos enemigos sin escolta, tctica que usaban con gran
xito. En el mapa siguiente, las zonas marcadas con rayas indican las reas de
mxima actividad de los submarinos alemanes durante la guerra.2 Con esto se
aprecia el peligro que corran los pasajeros de los barcos de esa poca cuando
cruzaban estas zonas del Atlntico.
Tras hacerse a la mar, los U-boat
operaban
de
forma
prcticamente
independiente para localizar convoyes
en las zonas que les haba asignado el
alto mando. Si encontraba uno, el
submarino no atacaba inmediatamente,
sino que lo segua de cerca para
permitir que otros submarinos de la
zona encontrasen al convoy. Luego se
agrupaban en una fuerza mayor y
atacaban simultneamente al convoy,
preferiblemente de noche y en la
superficie. Otras veces los submarinos
alemanes pasaban debajo de los buques
de
escolta
arrojando
cargas
de
profundidad formando verdaderos de
fuego submarinos. Ellos raramente
atacaban cuando aviones protegan los
convoyes.
Esta batalla poco a poco se recrudeca, con los alemanes causando grandes
victimas en los barcos aliados tratando de llevar los muy necesitados suministros a
Inglaterra. Solamente en el mes de junio de 1942, los aliados perdieron ms de 170
buques por los ataques de los submarinos alemanes, la mayora en el Atlntico
occidental. Desde 1939 hasta 1942 hundieron 4270 barcos con el uso de 2176
submarinos alemanes.
Pero cuando ya todo pareca perdido, la ciencia vino al rescate. Los aliados
empezaron a usar un nmero de submarinos con tecnologas exitosas. La mas
efectiva era el radar, permitiendo a los buques detectar los submarinos en el rea. La
gran mayora de los grandes descubrimientos tecnolgicos se realizan durante las
guerras, pero el sistema de RADAR, invencin que salv a Inglaterra, fue
desarrollado a travs de los aos. Lo invent el fsico escocs Robert Watson-Watt
principalmente para alertar colisiones y que surgi en 1912 despus del Titanic
chocara contra un iceberg. Tambin hubo otros avances en la tecnologa como el
SONAR (ya documentado por Leonardo Da Vinci en 1490) que es una tcnica que
usa la propagacin del sonido bajo el agua para navegar, comunicarse o detectar
otros buques, que les permita controlar la actividad de los U-boat ms
efectivamente. En las ultimas guerras el uso del submarino ha sido un arma
mortfera no es como lo que Alejandro Magno pens cuando cre un barril de vidrio
para sumergirlo en el mar por el tiempo que le durara el aire.
Todo esto pasaba en el Ocano Atlntico cuando mis padres se disponan a
cruzarlo. El viaje en este barco francs el Alsina fue un viaje interminable y
2
J.M. Roberts, Twentieth Century: The History of the World, 1901-2000 (New York: Penguin, 1999), p.
380.
214
215
No solamente tenan hambre, sino que no tenan salarios y les faltaba dinero.
Un donostiarra, Jos Luis, se visti de frac y daba vueltas y ms vueltas por el barco
para conseguir vender su vestimenta y sacar un poco de dinero y al final tuvieron
xito, vendiendo hasta los zapatos. Tambin hubo romance y un noviazgo entre una
de las hijas gemelas del Dr. Salinas y el hijo de Alcal Zamora. Y se casaron mas
tarde en Buenos Aires, Argentina. El capitn que oa las noticias por la radio
publicaba en un pizarrn para que los pasajeros estuvieran al tanto. Al final el
capitn recibi rdenes para regresar a Casablanca y all esperar por un barco
neutral. Despus de todo este tiempo de vivencia a bordo del barco volvieron para
atrs, al puerto de Casablanca, Marruecos para esperar al barco neutral que les
llevara a puerto seguro.
Durante la Segunda Guerra Mundial los japoneses eran el peligro en el
Ocano Pacifico, los alemanes en el Atlntico y los italianos en el Mediterrneo.
A finales de octubre lleg al puerto un barco neutral en el cual todos los
pasajeros del Alsina pudieron atravesar el Ocano Atlntico, esta vez rumbo a las
Islas Bermudas.
GOLFO DE MEXICO- El golfo de Mxico es uno de los golfos ms grandes del
mundo. Se conecta con el Ocano Atlntico a travs del Estrecho de la Florida y el
Mar Caribe a travs del Canal de Yucatn. El buque salio de Veracruz el martes 25 de
noviembre de 1941 segua navegando ahora en aguas del golfo de Mxico El Mar
Mediterrneo americano se le llama por estar completamente rodeado por el
continente americano y por islas. Es el noveno ms grande cuerpo de agua en el
mundo. Sus aguas son ms estables que las de Mar Caribe. Este golfo se cre por la
colisin de los continentes que formaban el Pangea que es un supercontinente que
existi en la era paleoltica 250 millones de aos antes de estar separados el
continente como hoy en da. Su riqueza pesquera es vasta siendo los ms
importantes el mero, atn, trucha de mar, lenguado y miles de plataformas de
proteccin petrolfera y refineras.
GOLFO DE CAMPECHE- El barco segua su camino trazado y dejando atrs el
estado americano de la Florida. El Quanza se adentr en el golfo de Campeche que
es parte del golfo de Mxico al oeste de la Pennsula de Yucatn. Pasaron frente a la
ciudad de San Francisco de Campeche, capital del estado de Campeche que es una
ciudad fortificada a orillas del golfo. Es famosa por ser una de las pocas ciudades
amuralladas de America y la nica de Mxico. Los mayas ocuparon la regin desde
900 d. C hasta la llegada de los espaoles en 1517. Sus costas bajas y arenosas no
le permiten la existencia de puertos martimos de gran calado ni puertos naturales.
VERACRUZ- Mis padres en su largo viaje al exilio estaban llegando a Veracruz,
Mxico, a finales de 1941 atravesaron el golfo. Mirando al puerto como dndoles la
bienvenida estaba el faro de Venustiano Carranza, hroe de la revolucin mejicana
de 1917. El faro esta flanqueado por dos edificios de dos pisos, hoy en desuso y
convertido en museo. Esta fue la primera ciudad americana que pisaron viviendo
ocho das en un hotel cerca del puerto, y pudieron saborear algo de la cultura
mejicana y alegra del pueblo mejicano. Visitaron al fuerte de San Juan de Ula
ubicada frente al puerto en una pequea isla del mismo nombre en la que esta una
216
antigua fortaleza construida por rdenes de Hernn Cortes para proteger la ciudad y
puerto de los piratas y filibusteros. Posteriormente fue transformado en prisin para
polticos, uno de los lugares mas temidos de su poca en el pas. Actualmente es un
museo.
En el corazn del puerto est la Plaza de la Constitucin, que es el centro
cultural de la ciudad. Mis padres se sentaron en la plaza y vieron como maana y
tarde gentes jugaban el domino, acompaados de msica continua y a la noche que
es cuando mas acuda la gente a bailar al son de la alegre msica del Caribe. A un
costado de la plaza esta la Catedral de Nuestra Seora de la Asuncin (1731) a la
que acudieron cada da para rezar. Visitando a todo ello se les hizo mas corta la
estada aqu, pero estaban muy ansiosos de partir y llegar a su destino.
Veracruz es la ciudad ms grande del golfo, con el puerto ms grande, ms
viejo del continente americano y lleno de historia. En 1519 llego Hernn Cortes
arribo a este puerto y le llamo Villa Rica de la Vera Cruz debido a la cantidad de oro
existente en el rea y a la fecha de desembarco que fue en viernes Santo. Se
caracteriza por celebrar muchas festividades en lo que la ciudad entera se llena de
vida con la msica y espectculos de baile que tienen una fuerte tradicin.
El 18 de noviembre de 1941 el Quanza atraca en el muelle de Veracruz.
Todava les esperaba cinco meses ms de travesa. Ya estaban deprimidos, ansiosos
y cansados y su deseo era desembarcar en donde fuera y vivir en tierra, pero los
pasajeros que proseguan viaje como ellos tuvieron que abandonar el barco para
completa limpieza del mismo y esperaron por ocho das en un hotel cercano al
puerto.
MAR CARIBE- Muchos mares tienen y han tenido piratera o bandolerismo tan
antigua como la navegacin misma, corsarios como Francis Drake, pero es mucho
mas lo que se ha escrito y se ha celebrado en honor a los piratas de las mareas
misteriosas del Caribe; Los Piratas del Caribe. El parque temtico de Disneylandia
en Orlando en el estado de Florida donde se recrea vividamente a estos legendarios
vndalos del mar. Pirates de Penzance, opera cmica. Inspiracin en el cine, TV,
literatura como La Isla del Tesoro novela de aventuras escrita por el escocs Robert
Louis Stevenson, que uni a los piratas para siempre con mapas, goletas negras,
islas tropicales y marineros de una sola pierna con loros sobre los hombros.
(Treasure Island, 1883) que es una reflexin moral del protagonista hacia el dinero
y la ambicin.
La era de la piratera en el Caribe empez en el siglo XVI y duro hasta el siglo
XIX, la era dorada de la piratera, despus que los pases de Europa occidental y
Norte America con colonias en el Caribe empezaron a combatirlos.
El Mar Caribe es foco de muchos huracanes, actividad volcnica y terremotos
que son comunes en el Caribe pero tambin ofrece calor, belleza y manera de vivir
para muchas gentes de todo el mundo. Agua clara, templada y menos salada que el
Ocano Atlntico. Su nombre deriva de los indios Caribes que vivan aqu durante el
siglo XV. Este mar alberga 22 islas territoriales y bordea 12 adicionales pases
continentales.
Este mar tropical, junto al Mediterrneo, tiene el mayor cementerio de barcos
hundidos. Varios barcos cubanos fueron alcanzados por los torpedos de submarinos
nazis, otros muchos buques fueron alcanzados por el fuego de la marina alemana en
217
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las condiciones y la edad en que la hice, y los otros dos viajes me llevaran a hacer
cambios grandes y permanentes en mi vida.
En 1941 en que quedamos atrs en Europa mi hermana y yo, mientras
nuestros padres partan rumbo a Sur America. Nosotras estbamos viviendo en
distintas ciudades con diferentes familiares y en diferentes circunstancias. Segn el
notable psicoanalista ingls Edward John Bowlby (1907-1990), reconocido por en el
desarrollo infantil y sus pioneros trabajos sobre la Teora del Apego (1944). Ningn
lugar ha experimentado ms separaciones entre padres e hijos en la historia de la
humanidad que en Europa despus de la Segunda Guerra Mundial. Nos comenta la
importancia de la figura de la madre para el perfecto desarrollo emocional del nio
principalmente en sus primeros 5 aos de vida y como puede afectar al menor la
separacin de su madre, cosa que no es difcil de entender.
La guerra haba terminado y seguamos creciendo sin nuestros padres. Haban
nacido dos hermanos en Sur America. Mientras pasaban los aos y mis padres aun
soando en que pudieran volver a Europa pronto. Pero empezaron a planear la
manera de reunirnos con ellos Pero era difcil encontrar a una persona que se
responsabilizara por dos nias de 6 y 7 aos de edad. Yo lo quera tambin. Mientras
tanto en el ao 1947 comenz con sorpresas para nosotras. Mis padres anunciaron
que un nuevo hermano vendra alrededor de mi cumpleaos y yo podra ser su
madrina. La idea me caus alegra y ms entusiasmo tenia en ir. Ellos ahora vivan
en Montevideo, Uruguay, el cono sur de Sur America. En el colegio donde yo acuda
las monjitas aconsejaban yo recibiera la Primera Comunin, mis amigas haban
hecho el ao anterior y yo no por la esperanza de que mis padres regresaran pronto.
Agregaron era aconsejable antes de emprender el largo viaje del que se estaba
hablando. As se hizo. Y mis oraciones en ese gran da fueron escuchadas ya que al
poco tiempo el capitn Gastierena ofreci a mi to hacerse responsable de nosotras
en el viaje. Empezaron los preparativos, pero mi hermana no quera ni se atreva
acompaarme a hacer este aventurero viaje.
Ella era mas tranquila que yo y prefera no modificar la manera en que viva y
no estaba dispuesta para ningn cambio que alterara su modo de vivir. Yo era mas
curiosa y con deseos de vivir con mis padres como todas mis amigas, y si ellos no
podan venir yo ira donde ellos. Y este hecho no solamente cambiaria la vida ma
sino la de mis padres, hermanos y la vida familiar para siempre con repercusiones en
todos y cada uno de los miembros de la familia en diferente manera.
Mi vida ha sido siempre alterada por cambios y factores no muy comunes. Fui
engendrada en un fuerte medieval La Ctatela en Saint Jean de Pied-de Port,
Francia. Fui bautizada en la iglesia ms vieja de Paris, Saint Germain de-Prs que
haba sido la abada benedictina ms prestigiosa y antigua de Paris, y que fue un
centro de la vida intelectual y de la Iglesia Catlica francesa hasta que fue disuelta
durante la Revolucin y ahora se mantiene como la Eglise de Saint Germain de-Prs.
Durante mis aos de separacin de mis padres crec con abuelos y con diferentes tas
hasta que me reun con ellos a la edad de 9 aos haciendo una travesa de un mes
en barco sola, sin nadie conocido desde el puerto de Bilbao, Vizcaya, hasta el cono
sur de Sur America en Montevideo, Uruguay. Ciudad donde me esperaban mis padres
y tres hermanos pequeos todos ellos desconocidos.
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juncos, parecidos a los juncos que rodean las mrgenes del ro Gobelas. Parece ser
la calma volvi a mi espritu porque corr a contarle a Torino para que el tampoco se
asustara.
Mi ansiedad creci acerca de mi nuevo y desconocido mundo de mi nueva
familia y pas que iba a enfrentar pronto. Llegamos a la costa de Brasil, pero yo ya
no prestaba mucha atencin a nada porque mi inquietud se acrecent llegando a la
altura de Ro. Ahora la temperatura era ms templada. Haba salido de Bilbao en
invierno y llegbamos a Montevideo en verano. Al fin lleg el da, eleg ponerme un
vestido de verano, creo el nico que traa. Despus de comer me acerque a la borda
y ya poda ver como despacio el barco segua la costa y estaba entrando en el Ro de
la Plata, y pronto despus en el puerto de Montevideo que ya estaba casi enfrente a
nosotros. La fecha era 15 de enero de 1948, siete aos exactamente desde que
nuestros padres haban dejado Europa.
Frente a m en el puerto vea a mis padres y dos hermanos pequeos que
gritaban mi nombre Mirentxu. El capitn me llev a su cabina para esperar la
introduccin oficial ma a mis padres, y all en su cabina mientras esperbamos me
dijo que yo era una nia muy valiente, con mucho coraje. Se dice que coraje no es la
ausencia de miedo, sino fe a pesar de ello.
Ellos pronto subieron a bordo y al presentarse hubo mucho cambio de
emociones entre ellos y yo. El primero en abrazarme y darme muchos besos fue aita,
dicindome nere maitea luego ama y ella me tuvo un rato mas largo en sus brazos,
y me acuerdo que me deca que felices nos haces hija ma visiblemente
emocionada. Yo estaba orgullosa de mi hazaa y cuantas veces haba soado en este
momento, pero una vez hecho estaba lista para volver a la casa de los tos. Mis dos
hermanos pequeos parecan contentos de conocerme y me abrazaron, mi hermano
mas chiquito, Xabier que yo quera conocerle de apenas de 9 meses haba quedado
en casa. Me desped del capitn y de Torino y emprendimos la marcha hacia la casa,
y con ello todo lo conocido hasta ahora quedo atrs para siempre. En mi libro Nere
Aita y en mi ensayo Gure Ama describo detalladamente lo que me acuerdo de mis
primeras experiencias de este cambio.
El psiclogo organizacional William Bridges nos dice que Muchas personas
reaccionan al cambio a travs de tres etapas: finalizacin, la zona neutral y el nuevo
comienzo. La finalizacin es cuando se acepta que habr un cambio y las despedidas
sern inevitables. Se le considera zona neutral la transicin entre la partida del viejo
hogar al nuevo hogar. Mientras, el nuevo comienzo es sinnimo de adaptarse a la
nueva vida. Bridges hace hincapi en lo relevante que es superar estas etapas
porque si la persona no sobrepasa alguna puede quedarse paralizado en una
transicin incompleta e insatisfactoria (Bridges, p.27).
Era 1954 y econmicamente las cosas en Uruguay no iban muy bien y en
estos momentos a mi padre se le present una proposicin de trabajo muy buena en
Caracas, Venezuela. Con mucha pena tuvo que dejar a Uruguay para probar suerte,
mi madre y nosotros quedamos atrs esperando su decisin. Cuando el decidi que
se iba a quedar resolvieron que antes de reunirnos con el, mi madre, mis tres
hermanos y yo iramos a Euskadi por unos meses y luego reunirnos con el en
Caracas. Despus de 9 meses de preparaciones, pasaportes, pasajes, venta de todas
las posesiones, terminar las escuelas y la graduacin de la secundaria, estbamos
fsicamente listos, pero no emocionalmente para embarcar y dejar a nuestros amigos
y al pas que aprendimos a quererlo tanto.
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TERCER BARCO Del Mar- Este barco nos transportara a mi esposo y a m a Estados
Unidos. Era nuestra luna de miel. Salimos del puerto de La Guaira en el buque Del
Mar al anochecer. Yo no sabia cuando iba a volver a ver a mis padres y hermanos,
otra vez me separaba de todos ellos, pero estaba dispuesta a reanudar mi vida en un
nuevo pas. Estaba vez iba acompaada por la persona querida. Fueron ocho das de
viaje por el Caribe e hicimos escala en Curazao y Aruba antes de entrar en el Golfo
de Mxico cuando nos aproximbamos a nuestro puerto de destino, Houston, Texas.
La llegada al
puerto de Curazao fue
sorprendente porque
el barco entraba al
puerto pasando muy
cerca de una hilera de
pintorescas casas de
diferentes
colores.
Aprendimos
el
significado
del
nombre de la isla. Curazao quiere decir isla de curacin porque cuando llegaban al
puerto barcos con marineros sufriendo la enfermedad de escorbuto se curaban al
tomar las deliciosas frutas que ofrece la isla. Nuestro segundo y ltimo puerto era
Aruba antes de llegar a Houston. Fue un viaje feliz de ocho das cruzando un
intercambio entre el Mar Caribe salpicado de islas y el amplio Golfo de Mxico. Viajar
en un crucero por el Caribe es apasionante e inolvidable cuando se recorre el mar
caribeo y mas yendo de luna de miel. Fueron das felices y Bob y yo disfrutamos
ampliamente.
Tempranito a la maana el sbado 24 de setiembre el barco disminuy la
velocidad para entrar lentamente por el Canal hasta el puerto de tierra que est a 40
kilmetros adentro del Golfo de Mexico, y solamente a un kilmetro del centro de la
ciudad.
Por ser hija de exiliados nac en el exilio y he sido inmigrante toda mi vida he
tenido cinco diferentes pasaportes, he vivido en varios y variados mundos, y ninguno
de ellos ha sido realmente el mo por si. Yo no podra decir que esos mundos eran el
mo y los dems los prestados. Mudarse a otro pas siempre conlleva un choque
cultural, el cual corresponde a diferentes ideologas, idioma, clima, ambiente y
tradiciones. Hay que admitir que es un proceso arduo, pero abundante en
experiencias entender esto facilitara el cambio, aunque el cambiarse a otro pas
puede ser muy estresante.
El barco Del Mar me haba dejado en un mundo excitantemente nuevo.
Durante todos estos cambios el mar ha sido mi confidente y el que me ha llevado a
diferentes puertos que han marcado mi destino.
El escritor y poeta argentino Jorge Luis Borges dedica su primera poesa al
mar. Es el escritor argentino con mayor proyeccin universal. Una de las principales
figuras de literatura del siglo XX.
HIMNO AL MAR
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EPILOGO
HISTORIA Y SUERTE DE LOS SIETE BARCOS
BARCO PLOUBAZLANEC
Casi exactamente dos aos despus de dejar a mis padres en Francia el
buque Ploubazlanec encall y se hundi en la costa oriental de Tnez el viernes 30
de junio de 1939.
BARCO ALSINA
El barco francs Alsina fue construido en 1921 y hundido Alsina fue hundido
en un ataque areo alemn en Bougie cerca de las costas de Argelia un ao despus,
el 13 de noviembre de 1942.
BARCO QUANZA
Este buque sirvi para llevar a America a miles y miles de refugiados con
diferentes puntos de destino como a Mjico, Argentina, Nueva York y Republica
Dominicana tiene races legales e histricas en America porque traa casi un centenar
de judos escapando de las garras de Hitler. Llegando a Nueva York no les fue
permitido desembarcar no por ser judos sino por no tener visas, entonces el barco
regresara a Europa llevando su carga juda a quienes de seguro les esperaba la
muerte.
Pero antes de atravesar el Atlntico
tuvieron que hacer escala en Norfolk,
Virginia, para reabastecer el combustible
(carbn). Y estando encallado el barco en
este puerto la esposa del presidente,
Eleanor Roosevelt, se enter e intervino con
su esposo Franklin, para que les dejaron
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oscuridad que reina en el hogar de cientos de peces y plantas. Miles de personas han
presenciado las ruinas de este barco como una clase de turismo admirando lo que
en su da llev a tanta gente a la libertad. El buque Ro de la Plata fue hundido el
viernes 18 de agosto de 1944 en Acapulco.
BARCO MONTE AMBOTO
El barco Monte Amboto anteriormente llamado el Aya-Mendi de la Naviera
Sota y Aznar construidos por Euskalduna. Varios de sus ocho barcos cambiaron de
nombre y bandera durante la guerra para no ser atacados. Su nombre deriva del uno
de los montes de Vizcaya ms relevantes del Pas Vasco no solamente por su
importancia geogrfica sino tambin por su importancia cultural. Amboto ha estado
siempre envuelto en la magia y en la mitologa. No en vano, en una cueva cercana a
su cumbre, en la pared rocosa y acantilada de su parte este, nos cuenta la leyenda
que tiene su morada principal Mari, convirtindolo en un monte casi sagrado, la
Dama de Amboto, y dicen que se le suele ver en la boca de la cueva, los das de
buen tiempo, peinando su cabellera rubia con un peine de oro, al sol. No es raro
tampoco el verla pasar algunas noches como una gran bola de fuego sobre el cielo de
Amboto, hacia otros lugares del Pas Vasco donde posee morada o al cercano Oiz.
Dependiendo de donde se encuentre, habr buen o mal tiempo. En la mitologa vasca
que es el cmulo de creencias, personajes mticos y leyendas propias de Euskal
Herria (Navarra, Pas Vasco y Pas Vasco francs) que se remontan a tiempos
anteriores al cristianismo. El Amboto, de 1.331 metros sobre el nivel del mar junto
con la sierra a la que pertenece, es una de las cumbres ms caractersticas y
conocidas de Vizcaya y de Euskadi.
El Museo Martimo Ra de Bilbao, de Bilbao tiene esta pequea resea del
barco Monte Amboto. El Anboto Mendi fue botado el 5 de septiembre de 1928 en
los astilleros Euskalduna, para la naviera Sota y Aznar. Se trataba de un buque tipo
convencional, destinado a carga general, provista de cubierta corrida y 4 bodegas.
Desde el comienzo de la Guerra Civil espaola, en 1936, estuvo navegando bajo
pabelln republicano y controlado por el Gobierno Vasco hasta el 24 de agosto de
1937, cuando la tripulacin se pas al bando nacional. As, naveg bajo pabelln del
Gobierno de Burgos hasta el final del conflicto armado. Sera entonces entregado a la
Naviera Aznar, pasndose a llamar Monte Amboto.
Estuvo destinado a navegar en trficos de gran cabotaje y altura, como buque
tramp. Posteriormente, el buque sufri una transformacin, convirtindose en
buque mixto con capacidad para acomodar a 72 pasajeros, navegando desde
entonces y durante muchos aos, en la lnea regular Norte de Espaa-Sudamrica
con escalas en Bilbao, Vigo, Lisboa, Santa Cruz de Tenerife, Montevideo y Buenos
Aires. Tambin lo hara en la lnea Mediterrneo-Mar del Plata. Desguazado en
Santander el jueves 3 de marzo de 1977.
PROVENCE
En 1951 se construy en el ro Tyne para SGTM de Marsella el barco crucero
Provence para sus servicios a Sur America. Como crucero llevaba pasajeros para
vacaciones, pero tambin servia para trasportar inmigrantes italianos a sus nuevas
vidas en Sur America. Se vendi a la Lnea Costa en 1965 y fue re-bautizado con el
nombre de Enrico C y sigui operando hasta mediados de 1990.
DEL MAR
El barco Del Mar de la Lnea Delta construyeron los primeros barcos
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Capitulo 16 -
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233
Capitulo 17.
234
4. Jess Muoz Tebar. 1847-1909. Por Edgar Pardo Stolk y Vicente de Amezaga.
Caracas, Ediciones de la Fundacin Eugenio Mendoza, 1959. 63 p.
1959 - 63 pginas
6. Nostalgia
1993 - 518 pginas
15. Jimnez, Juan Ramn.- Platero ta biok. Illots Andaluzitarra. Ametzaga tar
Bingen euskeratua. Carlos Gonzlez Mendilahartzu' ren irudiak. Montevideo,
Editorial Florensa & Lafon, 1953. 109 p. Ilus.
235
.
17. Bolvar y los Vascos. Recopilacin de Artculos. Vitoria-Gasteiz, Gobierno
Vasco (1983?).Incluye poema Bolvar.
18. CARL, George, The boundary dispute between British Guiana and
Venezuela. Orgenes
del conflicto de lmites de Venezuela y Guayana,
Caracas, 1966.
19. FRANKEL, B., Venezuela and the United States. Venezuela y los Estados
Unidos.
Caracas, 1964.
20. LOMBARDI, J., Slaves in the republican legislation of Venezuela. Los
esclavos en la
legislacin de Venezuela. Caracas, 1967.
21. Editorial Xamezaga - Editorial Electronica 2011 - Presenta toda sus Obras
Publicadas e Ineditas (504) a la fecha
Enlace: http://editorialxamezaga.blogspot.com/
Enlace http://www.scribd.com/xamezaga
236
Cuando muri, en febrero de 1969, nos dejaba cinco libros impresos, sus artculos
mltiples, sus obras de traduccin al euskera editadas en revistas y otras que an
permanecen indita
INDITOS:
1)Traduccin del ingls al euskera.
1-1) Shakespeare, W.- El sueo de una noche de verano.
1-2) Shakespeare, W.- Julio Csar. Traduccin del ingls al euskera.
1-3) Ornar Kayan. Poemas. Traduccin del ingls al euskera.
5) Poemas perdidos:
Guerra y destierro (1942).
ngelus (1942-1944).
Rincones mgicos (1942-1944).
ltimos poemas (1945-1948).
237
Capitulo 18.
238
TRADUCCIONES(74)
1920-1967
INGLES al EUSKERA - INGELESA-EUSKARA:
1) CHAUCER, Geoffrey: Aholku onaren balada. Euzko Deya (Buenos Aires)
1943.
2) CRONIN, Archivald: Veronako bi zaldun. Egan (Donostia) 1967.
3) Egile ezezaguna: Kwai ibai gaineko zubiaren abestia [1]
4) EMERSON, Ralph Waldo: Agur. Euzko Deya (Buenos Aires) 1944.
5) KHAYYAM, Omar: Rubaiyat. Egan (Donostia) 1975 [2]
6) KILMER, Joyce: Zuhaitzak. Euzko Deya (Buenos Aires) 1943.
7) LINCOLN, Abraham: Gettysburg-eko hitzaldia. Caracas, 1963.
8) MARLOWE, Christopher: Artzain maiteminduak bere maiteari. Euzko Deya
(Buenos Aires) 1943.
9) MILTON, John: Zurekin hizketan (Paradise Lost poemaren zati bat). Euzko
Deya (Buenos Aires) 1944 [3]
10) POPE, Alexander: Bakartasuna. Euzko Deya (Buenos Aires) 1944 [4]
11) SHAKESPEARE, William: Hamlet, Danimarkako erregegaia. Ekin (Buenos
Aires) 1952.
12) SHAKESPEARE, William: Uda gau bateko ametsa. Argitaratu gabea.
13) SHAKESPEARE, William: Juli Kaisar. Argitaratu gabea.
14) SHAKESPEARE, William: Macbeth. Argitaratu gabea.
15) SHAKESPEARE, William: LXVIgarren hamalaukoa. Euzko Gogoa
(Guatemala) 1954.
16) STEVENSON, Robert Louis: Treasure island [5]
17) TAGORE, Rabindranath: Txori biak. Euzko Deya (Bilbo) 1918.
18) TURGENEV, Ivan: Errusiako mintzoa [6]
239
19) WHITMAN, Walt: Ontziburu!, nire ontziburu! Euzko Deya (Buenos Aires)
1944.
20) WILDE, Oscar: Reading Bahitegiko Leloa. Euzko Gogoa (Guatemala)
1954.
21) WORDSWORTH, William: Bihotza jauzten jat. Euzko Deya (Buenos Aires)
1944.
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Periodo 1939-1965
315) Athalie
316) Bihotza jauzten jat
317) Ontziburu!, nire ontziburu!
318) Aholku onaren balada
319) Agur
329) Zuhaitzak
321) Artzain maiteminduak bere maiteari
322) Bakartasuna
323) Zurekin hizketan
324) Finojosako neska behizaina
325) V. hamalaukoa
326) Andere bati
327) Bihar
328) Loreei
329) Hamleten neurtitzak Ofeleri
330) Ofeleren kantuak
331) Hobigilearen kantua
332) Maitagarrien kantua
333) LXVI. hamalaukoa
334) Reading Bahitegiko Leloa
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RESEAS BIOGRAFICAS
336) Ramon Maria Aldasoro
337) Jose Antonio Aguirre
338) Lope de Aguirre en su Purgatorio
339) Aramburu
340) Sabino de Arana el Libertador vasco
341) Lucio de Aretxabaleta
342) El Pastor bueno Monseor Arias
343) Artetxe y su coche, el castigo de los dioses
344) Nuestro Don Pio Baroja y Nessi
345) De Bolivar a Zaldivar
346) Madariaga Bolivar y los Vascos
347) De nuestra estirpeJose de Cadalso
348) Arturo Campion y Jayme Bon
349) Castelao y su Muerte
350) El Doctor Couture
351) Dialogos de Actualidad
352) Dialogos de muertos
353) El Cano, Juan Sebastian
354) Francisco de Xabier
355) Jesus de Galindez
356) San Ignacio y el Euskera
357) Irureta Goyena y los vascos perdida sensible
358) Larranaga, el Eximio Uruguayo
359) Leizaola Cultura y Responsabilidad
360) Urrundik versos de Telesforo Monzon
361) Orixe
362) Narciso de Oyarzabal
363) El Principe de Viana
364) Honrando a Dardo Regulez
365) Juan Sarrasqueta
366) Martin de Ugalde
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13 de 1956.
427) MARACAY.- Centro Vasco de Macaray (Venezuela), Octubre de 1956.
428) PERDIDA DE LOS FUEROS VASCOS.- Centro Vasco de Caracas,
Noviembre 11 de 1957.
429) GALINDEZ.- Centro Vasco de Caracas, Marzo 12 de 1958.
430) PERDIDA DE LOS FUEROS VASCOS.- Centro Vasco de Caracas,
Noviembre 11 de 1958.
431) JOS ANTONIO AGUIRRE.- Centro Vasco de Caracas, Marzo 22 de 1961.
432) LA LENGUA VASCA.- Centro Vasco de Caracas, Junio 14 de 1961.
433) EL HOMBRE VASCO PREHISTRICO.- Centro Vasco de Caracas, Mayo 17
de 1961.
434) ORIXE. Nicols Ormaetxea.- Centro Vasco de Caracas, Setiembre 13 de
1961.
435) NAVIOS Y NAVEGANTES. Centro Vasco de Caracas, Noviembre 3 de
1961.
436) SABINO ARANA GOIRI.- Centro Vasco de Caracas, Enero 26 de 1965.
437) LUCIO DE ARETXABALETA.- Centro Vasco de Caracas, Agosto de 1967.
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Filipinas.
476)LAS PRIMERAS VOCES DE LA LIBERTAD ; Alonso de Er-cilla y Lope
de Aguirre.
477)EL SIGLO XVIII. Desarrollo martimo; El Consulado de Bilbao.
Proyeccin internacional de sus ORDENANZAS.
478)EMPRESAS COMERCIALES ULTRAMARINAS; La Real Compaa
Guipuzcoana de Caracas, Sntesis de sus actividades y realizaciones.
479)EMPRESAS CULTURALES: La Sociedad Vascongada de Amigos del
Pas; Peaflorida y sus colaboradores. Alcances de la obra realizada.
480)SIGLO XIX. La Revolucin Francesa y su repercusin en la Euzkadi
continental. Prdida de las libertades de estas regiones.
481) LA GESTA NAPOLENICA. Resultados de la misma en el norte y en
el sur del pas.
482) LA CUESTIN DINSTICA ESPAOLA. La primera guerra carlista;
sentido de la intervencin vasca. Zuma 1 acrregui, el genio vasco de la
guerra.
483) LA SEGUNDA GUERRA CARLISTA. Sus caractersticas; prdidas
de las libertades, pervivencias.
484)Jos Mara de IPARKAGUIRRE; el bardo errabundo.
485) LA REACCIN EN EL PAS; fueristas y "euskalerriakos". Intentos
culturales y polticos de renacimiento; Arturo Campion.
486)SABINO DE ARANA GOIRI; races, vida, obra y doctrina.
487)RENACIMIENTO VASCO. Aspecto cultural. Congreso de Estudios
vascos. La Sociedad de Estudios Vascos. La Academia de la Lengua.
488) LA POESA PICA. Precedentes. El poema "EUSKALDU-NAK" de
Nicols de Ormaetxea.
489) LA POESA POPULAR. Los bertsolaris. El bardo Fierre de Echahun.
490) LA LRICA. Precedentes y contemporneos. Xabier de Lizardi y su
obra.
491)EL TEATRO. Las "PASTORALES". Intentos modernos de creacin.
492)EL LIBRO vasco en euskera y castellano; historia, presente y
futuro.
493)EL PERIODISMO, EL CUENTO, LA NOVELA ; las traducciones.
494)LAS REVISTAS CULTURALES; obra realizada y por hacer.
495)ARTES PLSTICAS: msica v danzas; deportes.
496) EL PORVENIR DE LA CULTURA VASCA. De la escuela primaria a la
Universidad. El Euskera lengua de cultura
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497) Guerra v destierro Ao 1942 escrita en los Barcos que lo llevaron a Argentina
498) Poema en honor del presidente Roosevelt.- Ao 1945
499) AGIRRE, Domingo: Zer Pakea! Argitaratu gabea - Sin Publicar.
500) BAROJA, Po: Mari Beltza [8]. Argitaratu gabea - Sin Publicar.
501) BAROJA, Po: Angelus [9]. Argitaratu gabea - Sin Publicar.
502) BAROJA, Po: Mari Beltza [8]. Argitaratu gabea - Sin Publicar.
503) AGIRRE, Domingo: Zer Pakea! Argitaratu gabea - Sin Publicar.
504) ALIGHIERI, Dante: Infernua. Argitaratu gabea - Sin Publicar.
505 SALGARI, Emilio: Bukaneru zaharra. Argitaratu gabea - Sin Publicar.
506) SALGARI, Emilio: Argi Mendia. Argitaratu gabea - Sin Publicar.
507) ZIZERON, Marco Tulio: Zahartzaroa. Argitaratu gabea - Sin Publicar.
508) Herrikoia: La Torre de Alos. Argitaratu gabea - Sin Publicar.
509) LOPEZ MENDIZABAL, Ixaka, Xabiertxo. Argitaratu gabea - Sin Publicar,
510) ORIXE, Nikolas Ormaetxea: Los Vascos. Argitaratu gabea - Sin Publicar.
511) SHAKESPEARE, William: Uda gau bateko ametsa. Argitaratu gabea - Sin Publicar.
512) SHAKESPEARE, William: Juli Kaisar. Argitaratu gabea - Sin Publicar.
513) SHAKESPEARE, William: Macbeth. Argitaratu gabea - Sin Publicar.
514) STEVENSON, Robert Louis: Treasure island
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Capitulo 19.
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(92)
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Capitulo 20.
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Capitulo 21.
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2009 - Su hijo menor Xabier Iaki Amezaga Iribarren, tras un trabajo de Compilacion, edicion y
publicacion, recopila toda su obra, y crea una Pagina Web en Euskera que lleva su Nombre
Enlace: http://amezagatarbingenen.blogspot.com
CREACION DE LA EDITORIAL XAMEZAGA
2009. - Su hijo menor Xabier Iaki Amezaga Iribarren crea la Editorial Xamezaga - En cuyo
Catalogo de Obras se presenta las 504 obras de Vicente Amezaga en los diversos generos quel
cultivo
Editorial Xamezaga - Editorial Electronica 2011 - Presenta toda sus Obras Publicadas e
Ineditas (504) a la fecha
Enlace: http://editorialxamezaga.blogspot.com/
Enlace http://www.scribd.com/xamezaga
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Vicente Amezaga Aresti - permite la interaccion, con otros miermbros, asi como el
bajar (download) aquellos documento de interes del lector Creada en 10/13/2012
Catalogo de Obras
Enlace: https://www.box.com/s/kmlnz4v7hwfhsqvm5x8r
https://app.box.com/s/2dhudjrtlg28z6uyvlnc
Resumen final Total Obras Publicadas y no publicadas
https://app.box.com/s/tierujg4rnozl55dl9b3
Editoriales que Publicaron sus Obras
https://app.box.com/s/rasrbyroxl6trfptutxm
Obras Publicadas 290
https://app.box.com/s/kmlnz4v7hwfhsqvm5x8r
EDICIONES IMPRESAS XAMEZAGA
2013.- Ediciones Impresas Xamezaga
Publicacion en papel impreso -Libros- en 9 Volumenes, 94 Capitulos, y 2.300 paginas
Sus 231 Obras rescatadas de las 504 indexadas a traves de los diversos generos que el
cultivo.
ACTO DE DONACION OBRAS COMPLETAS VICENTE AMEZAGA A 9 BIBLIOTECAS
2015.- Fruto de la Compilacion, Edicion y Publicacion en Papel Impreso en 9
Volumenes, 94 Capitulos, y 2.300 paginas posiblito el Acto de Donacion de las
Obras Completas de Vicente Amezaga Aresti, llevando de la mano a mi Aita, a
9 Bibliotecas a nivel Internacional
1) Library of Congress Estados Unidos la biblioteca mas grande del mundo,
2) Biblioteca General de Euskadi Pais Vasco Pais donde nacio,
3) Biblioteca de la Academia de la Lengua Vasca Euskaltzaindia- donde el fue
Miembro de Numero desde 1957.
4) Biblioteca Central de Venezuela,
5) Biblioteca Eusko Ikaskuntza - Sociedad de Estudios Vascos
6) Biblioteca de la Fundacion John Boulton, siendo la de mas grata satisfaccion
de mi parte, por ser esta Institucion venezolana, quien creyo y apoyo a el, y
donde desempeo su mas fructifera produccion, hasta sus ultimos dias.
7) Biblioteca Central de la Universidad Central de Venezuela
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