Los Signos Del Zodiaco y El Amor - Géminis

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GMINIS

Los signos del Zodiaco y el amor


...por qu se escribi
Como descubriris en este libro, los signos solares con los que tenemos potencial para una
fcil compatibilidad, simpata y comprensin son mucho ms numerosos que aque llos con los
que es posible que descubramos una cierta dosis de tensin, antipata o falta de
comunicacin... y en la armona de nuestro sistema solar hay ms oportunidades para el amor
y la compasin que para el odio y el recelo.
Sin embargo, hombres y mujeres inquietos de todos los rdenes de la vida, desde gelogos
y eclogos hasta profetas y astrlogos, pronostican tenazmente la posibilidad de que se
aproximen cataclismos, tanto de factura humana como naturales, que traern consigo el peligro
de la aniquilacin antes de que haya transcurrido la prxima dcada crtica en este planeta
menguante, que pierde tan rpidamente su luminosidad. Nos lo han advertido, pero son pocos
los que han respondido. Es evidente que se necesita un milagro para que la Tierra vuelva a
prosperar.
Si aprendemos a utilizar la sabidura de los planetas, la clave de la Verdad Universal de
nuestros Co-Creadores, cada uno de nosotros podr crear un fragmento del mensaje que
abarca todo el espectro del arco iris, a saber, Paz sobre la Tierra a los hombres... y mujeres... de
buena voluntad, mensaje que entonaron los cuerpos celestes sobre Beln hace dos mil aos
para inaugurar la era de Piscis del dulce Nazareno, que slo nos pidi que nos amramos los
unos a los otros, y que nos prometi que lo que l haca, nosotros tambin podramos
hacerlo.
No es demasiado tarde, pues el jubiloso mensaje de las huestes anglicas (an no
identificadas) sigue haciendo reverberar su clarinada... inaugurando ahora la era de Acuario...
anunciando la esperanza para aquellos que observan los cielos y estn atentos a la msica.
Creo que para un milagro tan necesario, que quiz se aproxima antes de lo previsto, no podra
existir un preludio ms formidable que el de emplear el arte de los sabios de antao con el fin
de allanar el terreno para su retorno con una nueva Bsqueda Estelar del amor... del amor del
hombre por la mujer... y de ambos juntos por todas las plantas y criaturas vivientes. Porque
slo el amor tiene la facultad de traer la paz a los terrqueos de buena voluntad en la hora
crepuscular de la historia.

En el Ao de Nuestro Seor 1978

A todos mis lectores


Los signos del Zodiaco y el amor contiene una serie de conceptos polmicos de naturaleza moral,
filosfica e intelectual, en las reas de la ciencia y la religin.
A algunos de vosotros, estos conceptos os parecern estimulantes, a otros os parecern extraos y
sorprendentes, y a otros ms os podran producir una profunda ofuscacin. Aqu los presento como
veraces, y as los interpretaris muchos de vosotros... en tanto que es posible que otros les den una
interpretacin distinta.
He compartido con vosotros mis descubrimientos personales respecto de la verdad porque creo
que cualquier tipo de investigacin implica el deber de intercambiar con los dems lo que se ha
elucidado, para apresurar la gnesis de la armona en la Tierra, la paz definitiva.
Sin embargo, no os pido ni tampoco espero que interpretis mis conceptos como vuestra
verdad, a menos que concuerden con vuestro esclarecimiento personal y vuestras convicciones
particulares.
La verdad parcial la simiente de la sabidura se encuentra en muchos lugares. La verdad
parcial se puede hallar en el instinto primordial... en el derecho terrenal, en la costumbre social, en
la investigacin cientfica, en la filosofa y en la doctrina religiosa. Las semillas de la sabidura
estn implantadas en todo lo que se ha escrito a lo largo del tiempo... especialmente en el arte, en la
msica y en la poesa... y, sobre todo, en la Naturaleza.
Pero la autntica Verdad slo se puede encontrar en un lugar, en la comunin de cada hombre y
de cada mujer con una Fuente eterna de Conocimiento oculto que lleva dentro, y que cada individuo
debe buscar y hallar por s mismo.
Podemos mostrar la senda a los dems, pero cada uno debe marchar solo por esta senda: hasta
que cada extraviado haya realizado el viaje ntegro y hasta que todos hayamos alcanzado
finalmente la Luz de la Sabidura cabalmente formada que est en el final del Camino... de donde
partimos en un Tiempo ha mucho olvidado.

Prefacio
Como la sombra de Peter Pan, la curiosidad acerca de la compatibilidad astral sigue al astrlogo por el
segundo lugar de la derecha y sin parar hasta la maana. Es inevitable que en cada reunin alguien le
formule una pregunta de esta ndole: Cmo se lleva Sagitario con Piscis?. Tpicamente, en los programas
de radio y televisin, y en las entrevistas periodsticas, el profesional de la astrologa tropieza invariablemente
con: Mi marido es Leo y yo soy Acuario. Por eso reimos tanto?, o: Con qu signo le conviene casarse
a un Gminis?.
Todos desean conocer las reglas bsicas del juego de la combinacin y el apareamiento de los signos
solares. Incluso me he encontrado inerme en el silln del dentista, en plena extraccin de una muela, mientras
el profesional me deca: No se trata de que yo crea en la astrologa, pero qu posibilidades tengo con una
mujer Capricornio?.
Ahora bien, aquellos de vosotros que fuisteis jvenes (y que, segn espero, lo segus siendo), sabis lo que
Campanilla de Bronce le advirti a Peter Pan: Cada vez que un nio dice que no cree en las hadas, un hada
cae muerta en alguna parte. Asimismo, cada vez que alguien comenta que no cree en las estrellas, una
relacin humana cae muerta en alguna parte, pues le falta la comprensin que podra haber extrado del conocimiento bsico de la astrologa... y esto no es una fantasa. Es un hecho. El arte y ciencia ms antiguo del
mundo no tiene nada de misterioso, a menos que optis por considerar misteriosos los milagros de amor y
tolerancia que emanan de su empleo. Dejando de lado la semntica, da resultados, cualquiera que sea el
calificativo que le apliquis.
En cuanto a esos conocidos personajes del Pas de Nunca Jams, Peter Pan y Wendy, si bien he utilizado
algunos de sus comentarios, a lo largo de este libro, para simbolizar, en diversas circunstancias, ciertas
caractersticas de los doce signos astrolgicos, el Sol natal personal de Peter Pan se hallaba en el elemento
Aire mutable de Gminis cuando l fue creado. Oh, s! Peter era un signo solar Gminis... a pesar de que
utilizo citas especficas suyas para simbolizar otros signos del libro. Era un signo solar Gminis que deseaba
no crecer nunca, que buscaba algo que nunca poda terminar de hallar, que estaba eternamente destinado a
sentirse seguro slo de su propia sombra y nunca de otro ser humano... hasta que, confiemos en ello,
aprendiera por fin la leccin del amor mediante el esclarecimiento eventual.
Wendy era evidentemente una Cncer: maternal, posesiva, afable e imaginativa, y ensayaba sus alas en un
vuelo de fantasa bajo la Luna llena, como a menudo lo hacen las doncellas lunares. Como veis, no estaban
asociados por una slida armona de signos solares, de manera que rean de cuando en cuando, y cada uno de
ellos oa una meloda distinta. Wendy termin en el ltimo captulo como terminan casi todos los Cncer: a
salvo y segura. Aunque su corazn anhelara ansiosamente volver a volar, opt por el hogar, el matrimonio y
los hijos, como sueos finales, en tanto que Peter, como casi todos los Gminis, continuaba su bsqueda
eterna de un arco iris ms refulgente, all lejos... an obsesionado por dos deseos gemelos: el de sentar la
cabeza junto a Wendy, y el no menos vehemente de seguir siendo libre... y fiel a s mismo.
Pero cuando Wendy naci, la Luna seguramente estaba en Acuario, en aspecto trgono (armonioso) con el
Sol Gminis de Peter, y sta fue la razn por la cual, al principio, vol con l... y prometi volver a limpiarle
la casa todas las primaveras.
Vale la pena invertir tiempo y esfuerzos en comparar dos horscopos en busca de compatibilidad, porque cuando
encontris una relacin en trgono, en sextil o en conjuncin entre los respectivos signos solar y lunar (los
signos transitados por el Sol y la Luna a la hora de ambos nacimientos), ms un intercambio positivo de los signos
situados en los ascendentes con las luminarias, el amor asume una dimensin ms profunda. Todo amor es
capaz de trasmutar los deseos en realidad, pero el amor entre dos seres cuyas auras personales se han
amalgamado armnicamente, de esta manera, genera las vibraciones a las que se refieren los poetas, y puede
manifestar una magia maravillosa.
Entre los millones de parejas de la Tierra que procuran alcanzar (o han alcanzado) juntas una dicha y una

realizacin satisfactorias, y entre aquellas que an se debaten en medio de una difcil prueba sexual krmica,
transitan aquellas otras, muy raras, que reciben la designacin esotrica de compaeros del alma o almas
gemelas.
A veces ocurre que un hombre y una mujer se encuentran, y reconocen instantneamente a la otra mitad de su
propio ser tras los ojos del otro. Los ojos han sido correctamente designados con el nombre de ventanas del
alma. Incluso sus voces les resultan recprocamente conocidas, como un acorde musical recordado. stos son
dos seres que captan enseguida el hecho inalterable de que han sido, son y debern ser siempre uno, aunque
hayan luchado contra su hado durante siglos y se hayan esforzado en vano por evadirse de su destino comn.
Casi desde el primer momento en que se encuentran y se miran el uno al otro, sus espritus confluyen
jubilosamente, reconocindose, desdeando todas las convenciones y costumbres, todas las reglas sociales de
comportamiento, impulsados por un conocimiento interior que no pueden negar, pues es demasiado arrollador.
Inexplicablemente, a menudo sin pronunciar una palabra, saben que slo podrn alcanzar la integridad el uno
mediante el otro... y que slo podrn ser completos en todos los sentidos cuando estn juntos.
De alguna manera se sienten inmortales, y lo son... porque este nivel de amor puede conferir el
conocimiento inicial de la conquista de la longevidad multisecular en el mismo cuerpo carnal, en el plano de la
Tierra, as como la materializacin del cambio de cuerpos carnales (los templos del alma) en un estado
plenamente consciente, sin el coma denominado muerte. La solucin del problema de superpoblacin
que se plantear en el caso de que todos los habitantes de la Tierra logren este objetivo, ser analizada con
ms detenimiento en un futuro libro.
Tampoco intentar describir aqu detalladamente el origen y el destino final de las almas gemelas, porque
lo he hecho en otro libro, titulado Gooobers, que se publicar en el futuro prximo. Pero el tema de los
compaeros del alma o almas gemelas despierta una curiosidad tan acuciante, que merece una explicacin,
aunque incompleta, en este mismo contexto.
El hombre y la mujer que son compaeros del alma casi no necesitan pronunciar las palabras Te amo,
pues estn seguros de que debern ser el uno para el otro en la encarnacin (ciclo vital) presente, o (como
consecuencia de complicaciones krmicas) al cabo de muchos siglos. La frmula de la ceremonia matrimonial
que ningn hombre separe lo que Dios ha unido se refiere a estas personas. Sin embargo esta
advertencia es innecesaria, y slo se trata de un ritual simblico, porque ningn hombre puede romper el
vnculo entre las almas gemelas. Ni siquiera ellas mismas. Ni ninguna energa del Universo. La fuerza que las
cre es todopoderosa e indestructible. Es posible que el lazo se debilite, que la unin y la consumacin finales se
aplacen, pero nada podr separarlas definitivamente. Es infinita la dicha que podrn reivindicar cuando lo
deseen segn una tabla cronolgica dictada por el libre albedro de los ngeles superiores de sus propias
personas. (La superconciencia o supraconciencia de cada uno.)
A este tipo de atraccin magntica instantnea se lo denomina a menudo amor a primera vista, el cual no es
un azar del destino, sino algo muy real. Es algo ms que una curiosa coincidencia que las almas gemelas confluyan
en el momento apropiado, en medio de la inmensidad del mundo. El entrecruzamiento de sus caminos ha sido
predestinado en un nivel superior de conciencia. Es tan cierto que determinadas energas espirituales actan
para producir estos encuentros, como que la migracin de las aves y el retorno de los cometas estn
gobernados por una ley universal anloga. Su confluencia es controlada por las operaciones del Karma, que
no es ms que la suma total de las causas movilizadas en el pasado... y stas determinan infaliblemente las
condiciones del presente. Cuando llega la hora de que las almas gemelas se encarnen, stas son enviadas a la
Tierra y revestidas de carne (una vez ms, los cuerpos son los templos del alma) por la accin de
determinadas fuerzas de tiempo-energa, en el momento de la Cronologa Terrquea en que ciertas
configuraciones planetarias generan las condiciones propicias. Estas fuerzas de tiempo-energa son de
naturaleza electromagntica, pero ms complejas de lo que esta palabra da a entender.
Ninguno de nosotros puede controlar los resultados finales de las causas que iniciamos o pusimos en accin
en nuestras vidas pasadas, aunque s podemos controlar nuestras reacciones a los resultados que estas causas
pasadas producen en nuestra vida actual. La personalidad superior posee el libre albedro para modificar
estos acontecimientos krmicos, y nosotros podemos adquirir este poder si aprendemos a sintonizamos o comunicarnos con la personalidad superior (supraconciencia). Pero en el nivel consciente el libre albedro
slo puede realizarse en el futuro, porque, en esa corriente siempre fluida que llamamos presente, ponemos en
marcha, mediante acciones que iniciamos ahora y mediante reacciones a causas pasadas, las condiciones
futuras con las que tropezaremos inevitablemente.

En cuanto a las influencias planetarias especficas de las natividades (horscopos o cartas natales) de dos
personas, influencias stas que le revelan al astrlogo que se trata de almas gemelas, lo cierto es que son
demasiado complejas para explicarlas exhaustivamente en este libro, en toda su magnitud, y deberemos dejarlas para
otro volumen programado, que se ocupar de este tema y otros afines. Pero suponiendo que dichas influencias
planetarias estn presentes en las cartas respectivas de los enamorados, se revela un destino en el cual los dos se
encontrarn involuntariamente y en el cual ser imposible separarlos, incluso mediante la experiencia de la
muerte, excepto durante intervalos de tiempo terrqueo, destinados a la verificacin krmica de las almas. Durante
estos perodos de separacin, ya sean breves o prolongados, las dos personas se sienten solas, vacas e incompletas.
Sin embargo, incluso durante estas interrupciones temporales de su convivencia, existe entre ellas una
comunicacin astral constante, pulsante, porque aun entonces se hallan unidas por un cordn que las conecta a
travs de la distancia.
Recientemente una mujer que conozco se hallaba sumida en un estado de ansiedad emocional, y
experimentaba una necesidad desesperada de conectarse con el hombre que amaba (un alma gemela), el cual
se hallaba fuera del pas. No tenan cmo comunicarse por telfono o por carta. Una noche estaba postrada en
la cama, en la oscuridad, e intua marcadamente su presencia pero se senta frustrada porque no poda verlo ni
orlo ni tocarlo, y de pronto exclam en voz alta, involuntariamente: Oh, por qu no me oyes cuando te
llamo?. La lmpara colocada sobre el escritorio, en el otro extremo de la habitacin, se encendi
sbitamente. Al mismo tiempo, una gran margarita de papel que l le haba regalado meses atrs, cay al
suelo. La mujer se sent en el lecho, atnita, mir la lmpara y la margarita cada, y volvi a hablar en voz
alta. Si has sido verdaderamente t quien encendiste la luz, puedes darme una seal de que tu cuerpo astral
est realmente aqu, apagndola ahora mismo? Enseguida el interruptor de la lmpara chasque
audiblemente y dej la habitacin a oscuras... e inmediatamente volvi a chasquear poblndola de luz. Antes
del episodio la lmpara haba estado apagada durante varias horas, de modo que no se trat de un corte de
energa.
Lo que sucedi no tena absolutamente ninguna explicacin cientfica. Ni la bombilla ni el interruptor
estaban flojos, y tampoco haba ninguna avera en la conexin o el enchufe. Todo fue minuciosamente
comprobado. En cuanto a la margarita, haba pasado muchos meses firmemente implantada en su lugar,
adherida a un cuadro que colgaba de la pared, hasta ese momento imprevisto. Las leyes de la metafsica
explican fcilmente semejantes milagros. El alma gemela de la mujer haba captado la necesidad de sta, y
haba respondido, guiada astralmente por sus respectivas personalidades superiores, a travs del cordn azul
plateado que las conectaba: un hilo de luz capaz de impresionar materialmente la visin fsica de un
parapsiclogo o un sensitivo experto. Ms tarde la mujer se enter de que exactamente a la misma hora l
realizaba esfuerzos ansiosos para comunicarse con ella. Quienes aman lealmente, y quienes saben utilizar el
cordn de energa elctrica que los une, no necesitan de la Western Union, ni del correo, ni de la telefnica,
para comunicarse. Siempre estn en contacto mediante su telgrafo astral. Ha habido incontables casos
anlogos entre dos personas asociadas por todo tipo de relaciones de amor: padres e hijos, amigos ntimos,
maridos y esposas... y amantes.
An omos los clamores de la ciencia: Dadnos hechos, hechos, hechos!. La astronoma y la ciencia, son
incapaces ambas de ver el gran bosque metafsico del conocimiento a travs de los rboles de la baja
matemtica y la baja fsica, sin el prefijo meta, en tanto que la metafsica podra explicar tantos misterios.
Meta es una palabra griega que significa, sencillamente, ms all. La verdad reside ms all de la
ficcin del hecho? Einstein tena conciencia de ello. S, el abstracto Albert lo saba. Algn da muy prximo,
en esta naciente era de Acuario, el descubrimiento de instrumentos suficientemente sensibles para medir la
tremenda energa del campo magntico del amor demostrar cmo sus impulsos elctricos pueden dejar en
suspenso las leyes de la Naturaleza (pero no perjudicialmente), invertir la gravedad (y tambin el proceso de
envejecimiento, mediante la regeneracin celular), aumentar la comunin teleptica y producir muchas otras
manifestaciones milagrosas, incluida la evocacin consciente de encarnaciones anteriores, lo cual por fin
convencer a la ciencia escptica. S, el amor puede lograr todo esto, si el deseo es suficientemente vehemente
y si la motivacin no es egosta... cuando se movilizan suficiente fe y suficiente voluntad. Ocurre todos los
das.
Testigos fidedignos han observado frecuentemente cmo una mujer de cuarenta y cinco kilos puede
levantar las ruedas de un camin de dos toneladas si su hijo est atrapado debajo de ellas: una inversin total
de las leyes fsicas que concuerda empero perfectamente con las leyes de la meta-fsica. El amor es mucho

ms que una emocin o un sentimiento. El amor es un impulso elctrico positivo. La ciencia an no ha


perfeccionado instrumentos suficientemente delicados o refinados para detectar estos impulsos, que, sin
embargo, existen. Los cientficos tampoco creyeron en las ondas electrnicas de la radio hasta que pudieron
medirlas.-.. y sin embargo ah estaban, siempre. Como escribi H. T. Buckle en su History of Civilization in
England: ... habitualmente pasan unas pocas generaciones y entonces comienza un perodo en el cual estas
mismas verdades son interpretadas como hechos comunes: y un poco despus comienza otro perodo en el
cual son declaradas necesarias, e incluso la mente ms obtusa se pregunta cmo fue posible que alguna vez las
negaran.
Durante la trabajosa bsqueda del alma gemela habr muchas desviaciones, muchas relaciones que al
principio parecern genuinas y despus se diluirn en la indiferencia y el hasto. Incluso cuando por fin se
descubre el alma gemela, a menudo se producen muchas complicaciones y verificaciones que causan
sufrimientos temporales. Slo la prctica continua y consecuente de la tolerancia y la clemencia puede aliviar
el dolor. El intercambio de dolor por dolor slo genera la certidumbre futura de una reaccin anlo ga, de ms
dolor, por obra de la causa y el efecto krmicos.
A veces, parece que los problemas de dos personas que se aman son insolubles, que el muro que los separa
es tan alto que no podrn salvarlo. Pero sus problemas se disiparan, desapareceran sencillamente, si slo
pusieran en contacto sus manos, o sus corazones, o sus mentes, o incluso sus narices, y susurraran una sola
palabra: magia!. Porque el amor es magia, el poder secreto que todos los que aman poseen sin saberlo.
Aunque el trauma sea enorme, aunque las palabras sean crueles, el amor lo borrar todo, como si nunca
hubiera existido. Pero no si quien ha infligido el dolor no lo desea y no se esfuerza... no si quien ha sido
profundamente herido carece de la capacidad de perdonar. El deseo, el esfuerzo y el perdn, combinados, son
necesarios para liberar la fuerza y el poder del amor.
La legendaria bsqueda del Santo Grial implica una bsqueda doble. En el nivel material o terrenal, gira en
torno de la copa concreta de la cual el Nazareno bebi en la ltima Cena, y que segn los antiguos fue
enterrada cerca del lugar donde los sacerdotes druidas (descendientes de los esenios) celebraban sus ritos
msticos... copa cuyo descubrimiento es inminente en la era del Aguador.
En un plano ms sublime, mstico, cada ser humano concluye con xito la bsqueda del Santo Grial cuando
se rene con el alma gemela. Porque slo cuando todas las almas gemelas solitarias y separadas se renan por
fin jubilosamente, las piezas del rompecabezas de la vida se ensamblarn para formar una imagen ntegra y
completa dentro del Universo. La leyenda susurra que ser durante el despuntar de la era de Acuario cuando
los catorce fragmentos del alma de Osiris que se esparcieron cuando su cuerpo fue dividido en catorce
partes por su hermano Set (lo cual provoc la primera Puesta de Sol de la Tierra) se renan en un solo
hombre, con todas sus partes dispersas completas. Un hombre, que se reencontrar con su propia alma
gemela, Isis, despus de millones de aos trabajosos de bsqueda y de incontables encarnaciones que
compartieron en el pasado sin comprender la verdad.
Al mismo tiempo, las almas gemelas de Set y su Nepente, separadas hace mucho tiempo, se reunirn, para
cumplir su destino de descubrir juntas el Grial del Nazareno, mediante el amalgama de sus auras. Entonces,
dice la leyenda a travs del milagro de la absolucin recproca por aquel crimen lejano. Set y su hermano,
Osiris, junto con Isis y su hermana, Nepente, encontrarn de alguna manera, juntos, los anales perdidos de la
Atlntida... as como el sepulcro de Osiris, que contiene las crnicas de la construccin de la Gran Pirmide
de Gizeh, levantada por Osiris (y no por Keops, como se ha credo errneamente durante siglos). Cuando
estos hechos portentosos y sacrosantos se concreten, despus de que estos cuatro (y uno ms) reconozcan la
verdadera identidad de sus personalidades superiores, otras muchas almas gemelas se reconocern
sbitamente las unas a las otras. Entonces por lo menos empezaremos a materializar nuestro sagrado derecho,
tal como lo suplicamos en esos versculos del padrenuestro: Venga tu reino. Hgase tu voluntad, como en el
cielo, as tambin en la tierra, (como arriba, as tambin abajo), cambiando el esquema de la trinidad de
energas solar, estelar y lunar en el cosmos.
Quienes aman profundamente, y quienes estn autnticamente apareados con la otra mitad de s mismos, no
experimentan deseos de desencadenar guerras ni de dominar a los dems. As como la devocin de Romeo y
Julieta, aun en la muerte, tuvo el poder de disipar la enemistad y de conciliar las diferencias entre los
belicosos Montescos y Capuletos, as tambin la amalgama exttica de todas las almas gemelas enamoradas

tiene la misma facultad de unir a la humanidad, a todos los terrqueos para la Paz y el Bien permanentes. Pax
et Bonum. No es una coincidencia (nada lo es) que el hombre que por lo menos dio un paso inicial hacia la
paz en el Oriente Medio, Anwar el Sadat, sea autnticamente dichoso en su matrimonio y est casado con una
mujer que refleja los objetivos de su personalidad superior... y que lo mismo ocurra con Menajem Beguin, de
Israel, quien por lo menos al principio acept aquel gesto con el mismo espritu de buena voluntad y
sinceridad. Tampoco es una coincidencia que Hitler fuera un hombre solitario, hurfano de amor.
Jess... el carpintero de Nazaret? No estaba solo. No le faltaba el amor de una mujer. Aunque slo se trate
de un comienzo, el excelente y minuciosamente documentado libro The Sexuality of Jesus (Harper & Row,
1973), que Harper & Row reedit en 1979 con el ttulo de Did Jesus Love?, escrito por el reverendo William
Phipps, un Escorpin, arroja la necesaria luz sobre el misterio largamente oculto de Jess y su propia alma
gemela. Porque l era slo un hombre, aunque muy evolucionado... y ella, slo una mujer. Como t.
La doctrina de la divinidad, como la del patriotismo, implica una vibracin negativa, que sita a un
hombre, una mujer, una nacin, por encima de los dems. Jess, el Cristo? S, l era ms que humano, un
ente distinto, pero no diferente, no ms sobrehumano o divino de lo que puede llegar a ser cada hombre y
mujer durante esos perodos demasiado raros y breves de sintonizacin con la supraconciencia individual.
Anwar, el Cristo... Menajem, el Cristo... Ruth, el Cristo... Robert, el Cristo... Thelma, el Cristo... Michel, el
Cristo... Susan, el Cristo... Arthur, el Cristo, y as sucesivamente, incluyendo tu propio nombre. Cristo no es
ms que otro nombre para designar al Espritu Santo, que puede introducirse en cualquiera. Todos somos
hijos e hijas de Dios... y de Su Compaera, Su propia alma gemela. Cmo habra sido posible que nuestro
Creador no tuviera Su contraparte? La bipolaridad positivo-negativo, masculino-femenino, existe en todas las
dimensiones, en todos los niveles de conciencia, dentro de las galaxias del Cielo... y en el Infierno de la Tierra
(tal como se manifiesta actualmente). El mismo Jess nunca pretendi ser divino. Lo que yo he hecho,
tambin podis hacerlo vosotros, y ms... id y haced lo mismo... te ser hecho segn tu fe... . stas no son
reivindicaciones de singularidad espiritual, sino slo recordatorios de que las que se estaban exhibiendo eran
manifestaciones de lo divino que hay dentro de cada uno de nosotros, milagros que todos podramos
ejecutar... aunque no sin sacrificios, no sin ciertas disciplinas necesarias para controlar la mente, el cuerpo y
las emociones. Es extrao que la palabra disciplina abarque a la palabra discpulo. O quiz no es extrao
en absoluto.
Los cataclismos pronosticados, si llegaran a producirse, si no pudiramos evitarlos, habrn sido generados
por muchas fuerzas de las tinieblas... por la experimentacin subterrnea de inmensas energas destructivas...
por las vibraciones negativas de las olas actuales de promiscuidad sexual y lascivia que invaden las revistas y
el cine, y que ultrajan y degradan el sexo a su nivel ms bajo... por la feroz ambicin de lucro... por la
negativa egosta a compartir nuestro dinero, nuestros alimentos o nuestro amor con nuestros semejantes. Si
todos comieran sencillamente, todos comeran. La necesidad de sexo, como la necesidad de alimentos, es un
apetito devorador que se extiende por todo el mundo. Pero compartir nuestro amor no implica compartir
nuestros cuerpos en una sensual experiencia sexual de grupo. La glotonera no es la respuesta a ninguno de los
dos tipos de apetito.
El sexo no es un pecado; slo el empleo incorrecto de su energa es un pecado contra el ngel superior de la
propia personalidad. La unin sexual es el xtasis de lo profundo descubierto por quienes aman, y
simboliza la amalgama del hombre y la mujer con el Universo y con la totalidad de la Naturaleza, en la
unidad. Es una simple cuestin de prioridades. Primeramente os enamoris... con los ojos. Despus con la
mente, y despus con el corazn (las emociones). Para entonces vuestra alma se ha sumado a la experiencia
os deis cuenta o no de ello, os habis enamorado espiritualmente y es hora de enamorarse con el
cuerpo.
Cuando inverts el orden de este proceso, fracasis. Porque slo los ojos saben cmo introduciros en la
mente de la persona que mira. Slo la mente sabe cmo introduciros en el corazn de la persona con la que
habis descubierto una afinidad mental. Slo el corazn sabe cmo introduciros en la unin con el alma del
ser amado. Y el alma sabe muy bien... oh!, sabe muy bien, creedme... cmo introduciros, entonces, en el
xtasis de la unidad denominada acoplamiento sexual, que os convierte en una sola carne.
Pero si empezis por el cuerpo... el cuerpo no sabe a dnde conduciros, como no sea hacia ms y ms
sensaciones de la carne, que por s solas carecen de poder para materializar el anhelo de amor o alimentar el

ansia de amor ms profunda, sensaciones que en razn de ciertas leyes fisiolgicas, deben determinar
eventualmente que el cuerpo se inmunice a la sensacin, y necesite cada vez ms estmulos, hasta que
finalmente, como en el caso de las drogas, se llega al nivel de tolerancia incluso para esto, y se prefiere toda
sensacin. Utilizar el cuerpo como un instrumento exclusivamente reservado a la sexualidad sin amor, es
como escuchar una sinfona con un equipo estereofnico pero utilizando un solo altavoz.
S, es hora de que llegue un Mesas. Un Gua que nos recuerde una vez ms las lecciones bsicas de amor que
nos imparti antes y que olvidamos tan rpidamente. Porque no importa hasta qu punto un individuo o una
nacin ha cado en el error; el amor generar una renovada consagracin a la humanidad. As como no
importa cunto nos hemos alejado, porque el amor producir el retorno. Como lo seal el poeta Emmet Fox,
no hay distancia que el amor no pueda salvar cuando se lo proyecta con suficiente intensidad; no hay
enfermedad moral, mental, emocional o espiritual que el amor no pueda curar. No hay victoria que el
amor no pueda alcanzar. El amor es energa cintica concentrada, la fuerza ms portentosa de la Naturaleza...
y de ms all de sta.
Si slo pudierais amar con suficiente profundidad y sustentar el amor durante suficiente tiempo, podrais
convertiros en la fuente de vuestros propios milagros, y serais tan poderosos como los dioses y diosas de la
antigedad. No habra ningn sueo que no pudierais materializar, ninguna ley que no pudierais cambiar,
ninguna situacin que no pudierais invertir... si slo amarais suficientemente.
No es fcil amar suficientemente. Amar suficientemente no implica amar slo a aquellos que os aman a
vosotros, a aquellos que son buenos y considerados y generosos. Amar suficientemente implica tambin amar
a quienes lanzan toda clase de vituperios contra vosotros, a quienes os odian y demuestran activamente ese
odio, a quienes aparentemente carecen de toda compasin y sensibilidad. Cualquiera puede retribuir el amor
de quienes lo aman... o la aman. Este tipo de amor no entraa mucha gloria ni poder. Estamos encarnados en
estos cuerpos carnales, en la Tierra, para aprender la leccin ms profunda y difcil del amor, que consiste en
amar a lo que no inspira amor. En esta hazaa reside toda la fuerza y la energa de la verdadera pasin. En la
mayora de los casos se trata de un esfuerzo penoso, pero cuando lo conseguimos las recompensas son...
inimaginables. No os preocupis por la innecesaria canonizacin religiosa vosotros tambin podis
convertiros en santos si consegus amar suficientemente.
En trminos astrolgicos, casi no se necesita esfuerzo para que un Len y un Carnero se amen, para que un
Toro y una Cabra se amen. Pero para que un Carnero armonice con un Cangrejo, para que el Len armonice
con el Escorpin, el Toro con el Aguador... deben desplegar un amor sublime. Los signos del Zodiaco y el
amor, es un libro que procurar guiar a quienes tienen la fortuna de estar unidos por sus propios signos solares
compatibles... y que tambin procurar marcar el camino de la tolerancia y la armona a aquellas personas a
las cuales su destino krmico actual les ha impuesto la prueba espiritual de entablar relaciones con personas
de signos solares antagnicos.
Incluso cuando se trata de dos individuos cuyos signos solares y lunares armonizan, siempre hay en sus
respectivas natividades algunos planetas que chocan y que generan fricciones y tensiones peridicas. Superar
esto implica sintonizarse con la frecuencia pulstil de la personalidad superior, iniciar el ascenso por el
sendero que conduce al esclarecimiento... y marchar en una atmsfera mgica, bajo una lluvia de milagros.
Como una copa sin fondo, el Santo Grial de quienes aman nunca est vaco. En las matemticas de la
metafsica, que son las matemticas del Pas de Nunca Jams, veris... que cuantos ms milagros regalamos a
los dems, tantos ms quedan para vosotros y para m.
Quin entre nosotros no es, a ratos, indigno de ser amado? Y no son precisamente sos los momentos en
que secretamente anhelamos y necesitamos que ms nos amen? Oh!, la magia de que alguien a quien hemos
maltratado nos retribuya con un trato amable; el milagro de or, cuando hemos dicho: Siento haber
pronunciado esas palabras crueles, la respuesta: Qu palabras crueles? Yo no las he odo.
Entonces el corazn estalla de jbilo y la copa se desborda. Porque este secreto antiqusimo de la alquimia
es un secreto muy sencillo.

Si fue negativo, no sucedi... excepto en el mundo de la quimera.

Y as, ojal la fuerza... del amor... os acompae. Ojal ella evite los cataclismos naturales pronosticados, as
como los cataclismos personales de la separacin y el divorcio, mediante sus prismas de luz.
...y en su seno llevar los corderos...
ISAAS 40:11

10

Los
doce misterios
del Amor

11

El amor es la necesidad ms profunda del hombre y la mujer. Lo que abruma al espritu humano no es la
amenaza de enfermedad o pobreza, sino el temor de que no haya nadie que se interese sinceramente por
nosotros, nadie que nos comprenda realmente. Todos corremos desesperadamente en pos del amor, aunque
seamos muy sanos, ricos o sabios, porque la otra alternativa es la soledad. Y as es como se busca el amor en
el cielo y en el infierno, y lo buscan los santos y los pecadores, sin que importe a dnde los lleva la
bsqueda, que en la era de Acuario los conduce a algunos extraos lugares, por el laberinto de la revolucin
sexual.
Oye, qu significa este trauma del sexo?
toda esta gente que va a ver pelculas porno y la que no las va
a ver...
Los aficionados al intercambio de parejas y los idealistas, los puritanos y las prostitutas, las frgidas y las
promiscuas, los machistas y las militantes feministas, ya lean a Browning o Playboy, ya vean pelculas de
Walt Disney o las ltimas producciones erticas de Suecia, buscan lo mismo. Cualquiera que sea el camino
por el que transitan en pos de la felicidad, la necesidad interior que los impulsa a seguir adelante es el amor.
Y no se trata de darlo. Ni de recibirlo. Sino de compartirlo. Amar y ser amado en cambio.
Por qu el amor perdurable, mutuo, es tan esquivo? Para lograr una unin completa y permanente con la
otra mitas (el alma gemela) el hombre y la mujer deben aprender la leccin de los doce signos solar( s.
Deben asimilar la sabidura de estos doce misterios del amor antes de poder alcanzar una armona definitiva,
perfecta, entre sus naturalezas mental, fsica, emocional y espiritual.
A medida que giramos en torno de la rueda astrolgica o krmica de la vida, a travs del renacimiento
bajo la influencia de los diversos signos solares, a veces progresando deprisa, a veces retrasndonos,
volviendo a menudo a la experiencia de determinado signo solar para repasar viejas lecciones...
evolucionamos, cada cual a su propio ritmo. Nuestras propias personalidades superconscientes nos obligan a
perfeccionar gradualmente las cualidades positivas de los doce signos y a purgar nuestra naturaleza de sus
condiciones negativas, para que cada uno de nosotros se transforme eventualmente en el oro refinado de un
ente totalmente evolucionado, digno de unirse a la otra mitad: la personalidad gemela. En nuestro anhelo de
amor por nuestra alma gemela o compaero del alma reside nuestra sabidura metafsica latente. El
secreto de la vida misma. La verdad esotrica.
Cada signo solar contiene una fuerza que puede revertirse en debilidad, y cada signo solar contiene una
debilidad que puede revertirse en fuerza, merced a la ley de la bipolaridad positivo-negativo. Qu es la
obstinacin de Tauro sino su paciencia invertida? Qu es la naturaleza impulsiva de Aries sino el aspecto
negativo del coraje positivo de Marte, tpico del Carnero? Leo optar por ejercitar el gran orgullo y la gran
nobleza que le corresponden por derecho leonino-solar con el fin positivo de proteger a los indefensos, o con
el fin negativo de convertirse en un tirano arrogante que oprimir a los inermes? La cautela de Cncer se
transformar en temores y fobias lunares? La compasin y humildad de Piscis se trocarn en los aspectos
negativos de Neptuno: la impostura, la introversin y la evasin? La eleccin de las bipolaridades de nuestro
signo solar siempre corre por nuestra cuenta. Y si nos equivocamos al optar, deberemos revivir de nuevo la
experiencia de ese signo solar, hasta asumir el control de su fuerza positiva.

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Las doce iniciaciones del amor


En cada una de las experiencias siguientes, el hombre o la mujer es absolutamente capaz de conferir y
ensear a los dems la primera cualidad, pero para que la personalidad aprenda la segunda cualidad hay que
hacer un gran esfuerzo. Cuando el individuo comprende esta segunda cualidad tan bien como la primera, ello
implica que ha adquirido el dominio de un determinado signo solar. El alma debe pasar ms de una vez por
las seis primeras iniciaciones del amor como :

ARIES

el recin nacido

yo soy

para ensear que el amor es


inocencia y aprender que el
amor es confianza
para ensear que el amor es
paciencia y aprender que el
amor es la capacidad de
perdonar

TAURO

el beb

yo tengo

GMINIS

el nio

yo pienso

CNCER

el pber

yo siento

LEO

el adolescente

yo har

VIRGO

el adulto

para ensear que el amor es


perspicacia y aprender que el
amor es sensacin
para ensear que el amor es
devocin y aprender que el
amor es libertad
para ensear que el amor es
xtasis y aprender que el amor
es humildad

para ensear que el amor es


yo analizo puro y aprender que el amor es
!a realizacin

Despus de alcanzar la madurez emocional en estas primeras seis etapas de desarrollo, el hombre y la mujer
deben pasar por las seis ltimas iniciaciones del amor (ms de una vez) para descubrir su sentido espiritual
ms profundo en:
yo
sopeso

para ensear que el amor


es belleza y aprender que el
amor es armona ,

LIBRA

matrimonio

ESCORPIN

sexo

SAGITARIO

conocimiento

CAPRICORNIO

experiencia

ACUARIO

idealismo

yo s

para ensear que el amor


es tolerancia y aprender que
el amor es unidad

PISCIS

sumisin

yo creo

para ensear que el amor


es compasin y aprender
que el amor es TODO

para ensear que el amor


yo deseo es pasin y aprender que el
amor es entrega
yo veo

para ensear que el amor


es honestidad y aprender
que el amor es lealtad

para ensear que el amor


yo utilizo es sabidura y aprender que
el amor es desinters

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y para comprender as finalmente que

El amor es eterno
Existe una razn profunda y significativa por la cual la meditacin sobre los doce misterios del amor que
figuran aqu es importante para ti y para el ser que amas. La clave es el nmero doce. Existen 12 sales
minerales bsicas que se emplean en homeopata (la ms til de las ramas de la medicina). Estas 12 sales
tienen un gran poder para fomentar un estado positivo de la salud humana en cada uno de sus doce signos
solares correspondientes, hecho ste que slo comprenden los homepatas profesionales y no los mdicos
ortodoxos (exceptuando unos pocos casos raros entre estos ltimos). Los minerales de la Tierra se ajustan al
nmero 12, lo mismo que los sistemas mtrico y duodecimal. Los diamantes, por ejemplo, tienen 12 caras o
ejes, a lo largo de los cuales es indispensable cortarlos para que tengan brillo. Hubo 12 gobernadores en el
sistema maniqueo, 12 divisiones del Templo de Salomn, 12 trabajos de Hrcules, 12 altares de San Jacobo,
12 dioses griegos y as sucesivamente.
Mucho antes de que los 12 hijos de Jacob fundaran las 12 Tribus de Israel, el nmero trece (13) tena un
importante significado mstico. Por ejemplo, haba 12 Caballeros de la Mesa Redonda, y el Rey Arturo era el
decimotercero. El Rey-dios Osiris del antiguo Egipto estaba asociado a 12 reyes de menor jerarqua, y Osiris
era el decimotercero. Igualmente el Rey-dios azteca Quetzacoatl tena 12 seguidores, y l era el decimotercer
miembro del grupo. En la Cristiandad, el Budismo Gautama y el Islamismo Shiita, tambin hay 12
seguidores (apstoles o discpulos) y un Maestro. Los 12 discpulos representan las doce etapas de
conocimiento de los signos solares, y el Maestro simboliza el nmero trece (13), o la pureza de la
amalgama perfecta de los otros doce en un todo completo.
Por ejemplo, los astrlogos esotricos pueden identificar a cada uno de los 12 apstoles de la Biblia
cristiana con la cualidad del signo solar que se corporiza en la actitud particular de ese individuo respecto de
las enseanzas de Jess. Esta verdad religiosa entrelazada, judeo-cristiano-islmica, se manifiesta en la
armona matemtica y el bello sincronismo de la rueda del horscopo.
La ignorancia espiritual, o la ceguera, genera el miedo supersticioso al temido nmero 13. Los pisos de los
hoteles saltan del 12 al 14, y pocas anfitrionas invitarn a trece comensales a una cena. Sin embargo, el
verdadero significado de este nmero santo es la sabidura. Si se lo utiliza para el mal puede provocar una
gran destruccin. Pero si se lo utiliza para el bien puede provocar una gran regeneracin. En sentido
negativo, simboliza al Maestro, que es la amalgama de las doce lecciones de los signos solares,
transformado en un ngel cado, como Lucifer. En sentido positivo, significa exactamente lo contrario: un
ngel que se mantiene inclume, que ejerce el poder y la sabidura eternos, atemperados por la justicia y la
misericordia y, sobre todo, por el amor.
La numerologa es un componente inevitable de la astrologa. El tema es demasiado vasto y complejo
para abordarlo a fondo en Los signos del Zodiaco y el amor, y lo analizaremos minuciosamente en un
prximo libro. Sin embargo, en el nterin, es necesario hacer una breve referencia a los nmeros planetarios
para poder entender cabalmente los doce misterios del amor. Cada signo solar armoniza con un planeta o
luminaria (Sol o Luna) determinado, y es regido por l. Y asimismo cada planeta armoniza con un
determinado nmero y es gobernado por l. Por ejemplo:
El Sol (que rige a Leo) vibra al son del nmero diez o uno (10=1), al que equivale cuando se lo suma
siguiendo el procedimiento matemtico normal.
La Luna (que rige a Cncer) vibra al son del nmero dos (2).
Jpiter (que rige a Sagitario) vibra al son del nmero tres (3).
Urano (que rige a Acuario) vibra al son del nmero cuatro (4).
Mercurio (que rige a Gminis y temporalmente a Virgo, hasta que se descubre e identifi ca al planeta

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que rige autnticamente a Virgo. o sea Vulcano: vase el captulo Virgo -Virgo) vibra al son del
nmero cinco (5).
Venus (que rige a Libra y temporalmente a Tauro, hasta que se descubre que el que rige autnticamente a
Tauro es Pan-Horus: vase el captulo Tauro-Tauro) vibra al son del nmero seis (6).
Neptuno (que rige a Piscis) vibra al son del nmero siete (7).
Saturno (que rige a Capricornio) vibra al son del nmero ocho (8).
Marte (que rige a Aries) vibra al son del nmero nueve (9).
Cada planeta y luminaria tambin vibra al son de lo que se denomina un nmero de octava ms alta, pero
dejaremos la explicacin de esto para el prximo libro ya mencionado.
Quizs hayis notado que en esta lista falta el nmero con el que vibra Plutn (que rige a Escorpin).
Muchos astrlogos y estudiosos de la numerologa os dirn que Plutn vibra al son del nmero nueve (9), y
que comparte este nmero con Marte (que gobierna a Aries). No es cierto. Plutn, como todos los otros
planetas, vibra al son de su propio nmero particular cabal e individualmente suyo y no lo comparte
con ningn otro planeta o luminaria. Como ya hemos agotado los nmeros desde uno (1) hasta nueve (9), y
diez (10), como vibracin del Sol que gobierna a Leo, volviendo as al uno (1) y completando el crculo, tal
vez os preguntaris cmo es posible que Plutn tenga su propio nmero. Ya lo veris.
En primer trmino, es importante comprender que la vibracin nueve (9) de Marte es la vibracin
masculina del Universo, que representa y simboliza el principio MASCULINO ltimo de toda la vida y el
amor. La vibracin seis (6) de Venus es la vibracin femenina del Universo, que representa y simboliza el
principio FEMENINO ltimo de toda la vida y el amor.
El seis y el nueve. El 6 y el 9. Los nmeros vibratorios femenino y masculino, o el 9 y el 6. Macho y
hembra. Positivo-negativo. Oscuridad-luz. (Bipolaridad.) Observad que cuando el nmero femenino de
Venus, el seis (6), se coloca cabeza abajo (invirtiendo su polaridad) se transforma en un nueve (9). Asimismo,
cuando el nmero masculino de Marte, el nueve (9), se coloca cabeza abajo (invirtiendo su polaridad), se
transforma en un seis (6).
El hombre y la mujer son, pues, inseparables. Cada uno es una parte igual del otro. Los principios
masculino-femenino son totalmente intercambiables. Sin embargo, uno de ellos siempre apunta en direccin
opuesta al otro. En la numerologa hay muchos ms niveles fascinantes y reveladores de estudio del seis y el
nueve, pero aqu slo nos ocupamos sucintamente de este tema, que analizaremos a fondo en un libro futuro.
Observad que cuando se les quita la cola, el seis (6) y el nueve (9) se transforman en un crculo. El
crculo es el secreto de la fusin de las almas gemelas... el misterio ms insondable del signo solar de
Escorpin, y del planeta que gobierna a Escorpin, el portentoso y poderoso Plutn. Porque el nmero a cuyo
son vibra Plutn es... el CERO. El crculo. El crculo (0) representa la eternidad, porque simboliza la serpiente
que se devora su propia cola. De la cabeza masculina (positiva) de la serpiente fluye la energa masculinopositiva... hacia la cola femenina (negativa) de la serpiente. Simultneamente, de la cola femenina (negativa)
de la serpiente fluye la energa femenino-negativa hacia la cabeza masculina (positiva) de la serpiente.
ste es el secreto de Escorpin, el signo solar del sexo... y sta es la energa que alimenta el enorme
poder del planeta que gobierna a Escorpin: Plutn. El cero. El crculo. El O. La serpiente que devora su
propia cola. El smbolo de la eternidad. Porque el autntico poder slo puede existir cuando todas las
bipolaridades macho y hembra, joven y anciano, oscuridad y luz, noche y da se transmiten energa
simultneamente las unas a las otras, y fusionan sus energas en lugar de seguir oponindose entre s.
El cero vibratorio de Plutn tambin contiene el misterio secreto de la Santsima Trinidad de la
Cristiandad. El Padre-el Hijo-y-el Espritu Santo. El hijo (humanos, de ambos sexos) es la energa
masculina. El Espritu Santo (el espritu de Cristo) es la energa femenina. Cuando cada una fluye
simultneamente en la otra (en lugar de mantenerse en oposicin) se genera una tercera energa, que es las
dos, y sin embargo ninguna neutral y TODOPODEROSA-, o sea: El Padre (Dios). Esta tercera energa,
compuesta por la masculina y femenina combinadas, que fluyen la una en la otra, en lugar de oponerse,
genera muchos milagros: El gran poder de la Divinidad. La concepcin de un hijo. La concepcin de una
idea (que se transforma en ideal si se le agrega la 1 de love, la palabra inglesa que significa amor). La
energa que mueve a las naves espaciales de otros sistemas solares.

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Kekule, que hizo el monumental descubrimiento de la estructura anular del benceno, descubrimiento ste
que a su vez allan el camino para el aspecto terico de la qumica orgnica, no dijo por casualidad que antes
de que se le ocurriera este concepto haba soado repetidamente con una serpiente que se devoraba la cola.
Por tanto, todo el misterioso poder de Plutn-Escorpin proviene de un conocimiento inconsciente de
este principio del cero en virtud del cual la fusin perfecta entre lo masculino y lo femenino crea una tercera
fuerza de energa, que es lo uno y lo otro, y sin embargo no es ninguno de los dos neutra y
TODOPODEROSA- porque no se opone, sino que hace que las bipolaridades se fusionen y fluyan
simultneamente la una en la otra.
Otro testimonio, otro secreto del crculo CERO de Plutn, es el siguiente: qu sucede cuando se agrega el
CERO (0) a cualquier otro nmero? Cualquier banquero o estudiante de matemticas os dir que aumenta
el poder del nmero. Evidentemente, el monto de un dlar crece (tiene ms poder) a medida que se
agregan ceros. As, 1,00 dlar se convierte en 10,00 dlares o 100,00 dlares o 10.000,00 dlares y as
sucesivamente. El CERO, pues, equivale al PODER. Esta noticia complacer a todos los Escorpin...
siempre que no olviden dnde reside el origen del poder. En la serpiente que se devora la cola... el secreto de
la eternidad.
Un factor importante para comprender los doce misterios del amor, relacionados con el secreto del crculo, es
el siguiente. En el texto de este libro encontraris a menudo el trmino Co-Creadores. A los escpticos, a
los que les resulta difcil imaginar al Dios del Antiguo Testamento con su propia consorte, les suministro
esta informacin erudita, aunque los creyentes y las personas espiritualmente espabiladas no necesitan ms
pruebas que el conocimiento instintivo que procede de dentro, respecto de este o cualquier otro concepto
sobre la veracidad de la creacin.
La cita siguiente proviene de una escrupulosa traduccin de la Septuaginta, la versin ms antigua (circa
250 a.J.C.) que se conoce del Antiguo Testamento (los manuscritos hebreos clsicos se remontan apenas al
Renacimiento). La traduccin fue publicada en 1960 por la Falcon's Wing Press, bajo la supervisin del
doctor C. Muss. Extractos de Proverbios 8:3-31:
Pues a las puertas de la Grandiosa, Ella ha tomado asiento, y en la entrada
entona su cancin:
En el principio, antes de que el Seor creara la Tierra cuando l
afirmaba los Cielos, yo estaba con l,
y cuando l distingui su trono sobre los vientos cuando l puso
lmites al mar,
y las aguas no trasponan el verbo de su boca yo armonizaba
con l. Yo era aquella en quien l se regocijaba, y diariamente
me alegraba su presencia en todas las ocasiones.

La Cristiandad eclesistica, en la que el Antiguo Testamento hebreo sembr la deformacin de la verdad


mediante la imagen patriarcal, ha enseado durante demasiado tiempo la falacia de que la Santsima
Trinidad es totalmente masculina. Esta superchera nos ha privado de una verdad sublime y enaltecedora. Pero
el desarrollo de la era de Acuario, pronosticado por los profetas de todas las religiones, traer la luz de la
restauracin consciente del equilibrio ureo entre las energas femenina y masculina sobre la Tierra. Este
equilibrio ureo es la fusin eventual de todas las almas gemelas. El concepto est a punto de florecer dentro
de todos los corazones anhelantes e indagadores. Le aplican muchos nombres, pero l autntico es la REAL
PERSONALIDAD, tal como se experimenta mediante la unin con la propia alma gemela. Y empieza con la
admisin de la verdad masculino-femenina oculta en la Santsima Trinidad y el smbolo de la Eternidad, la
serpiente que se devora la cola, el conocimiento secreto' que la serpiente le transmiti a Eva, quien se lo
retransmiti a Adn. El hecho de que al acto de comer el fruto prohibido del rbol del conocimiento lo
llamaran ms tarde Pecado Original, revela la desesperacin de las fuerzas oscuras por ocultar la Luz de la
Verdad mediante una deformacin bipolar, encauzada a travs de los antiguos patriarcas que teman perder el
pi incipio de la superioridad masculina en razn de la igualdad sexual. Pero las hijas de eva de la Era de
Acuario le harn comprender por fin al mundo que el trmino pecado original es el Padre de todas las

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supercheras maysculas del dogma religioso. Y los hijos de Adn de la era de Acuario se dejarn esclarecer
esta vez por la sabidura de Eva. Ni siquiera los padres de la Iglesia pueden parar el rayo del despertar
espiritual uraniano, predestinado y pronosticado, de la nueva era del equilibrio reo. Quizs Adn no pudo
acomodarse a la verdad. Pero los Acuario de hoy s pueden... y as lo harn.
Bajo las poderosas vibraciones de Urano y el microscopio de Acuario, quedar al descubierto la verdadera
naturaleza hipcrita de la patraa. Y a esto se lo denominar Inocencia Original... el comienzo de la
Sabidura. Cuando las gentes de todo el mundo empiecen a cooperar con estos principios divinos del
equilibrio ureo de lo masculino y lo femenino, la nueva era de Acuario se manifestar finalmente en todo su
esplendor y magnificencia a la Atlntida renacida y ms sabia. Ni siquiera la suma de todos los locos
chovinistas y atmicos y nucleares podr detener la marea uraniana de la Verdad.
A medida que el hombre y la mujer evolucionan alrededor del crculo krmico astrolgico, asimilando en su
propia individualidad las cualidades de otros signos solares, enseando algunas, aprendiendo otras, cada uno
de ellos tiene la obligacin espiritual de conservar la integridad positiva de su propio signo solar en esta
encarnacin y tambin de respetar este derecho en los dems. El Len debe tener su dignidad, as como el
Cangrejo debe aferrarse a la seguridad. La Cabra debe honrar la tradicin, y los Gemelos deben reclamar su
libertad. Cada cual debe obedecer el adagio de la era de Acuario que exhorta a vivir y dejar vivir, a ser uno
mismo, y a comprender que los dems tambin deben ser como son. El primer paso que debemos dar para
comprender el significado ltimo del amor, para que finalmente nos permitan disfrutar de su realizacin
absoluta, consiste en aprender a tolerar en lugar de condenar las cualidades de los signos solares que difieren
de las nuestras.
Al explorar las relaciones recprocas de los doce signos solares, a travs de sus rasgos armoniosos y
antagnicos en la medida en que los unos y los otros se asocian con los nuestros, siempre debemos tratar de
recordar que el objetivo final de cada alma consiste en dar las lecciones de cada signo solar a las otras
personas con las que nos cruzamos en el camino, y recibir recprocamente sus enseanzas. Este viaje es una
especie de desarrollo del espritu, que empieza en la infancia del alma y contina en la edad adulta del alma,
en su edad mediana, su vejez y su muerte, y despus en el renacimiento. El alma slo podr liberarse de
este crculo interminable de nacimiento y .nuerte cuando aprenda a liberar tambin el cuerpo fsico o denso de
!a muerte, milagro que me atrevo a predecir que se producir mucho antes de lo que actualmente creemos. El
problema que creara esta longevidad, respecto de la poblacin general del mundo (nuevos nacimientos,
junto con la derrota de la muerte durante siglos etctera) tiene varias soluciones. Pero ste no es el lugar
adecuado para tratar de concebir tales posibilidades. La discusin a fondo de lo que ser este futuro en la
nueva era que se aproxima deber quedar aplazada hasta mi prximo libro.
El viaje simblico del alma a travs de los doce signos solares se puede comprender imaginando a un hombre
y una mujer que realizan un viaje anlogo, con sus mentes y sus cuerpos. Al principio, el alma ingresa en la
fase inicial, parecida al nacimiento terrenal, y despus progresa a lo largo de varias etapas posteriores
similares a la vida terrenal, y en cada una de ellas asimila experiencia espiritual, as como nosotros
asimilamos experiencia mental y fsica durante un viaje anlogo de nuestros cuerpos densos. El alma "nace"
en el signo de Aries, el recin nacido simblico, tal como se refleja a travs de la alquimia magntica del Sol.

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El misterio de amor de Aries


El alma, simblicamente recin nacida en Aries (aunque no necesariamente en su primera estancia
terrenal), se relaciona con la aurora, el amanecer, la primavera y la Pascua... o con la resurreccin de su
muerte en el signo anterior de Piscis.
En esta primera incursin en el elemento Fuego esta experiencia como primera de los tres signos
cardinales el alma simblicamente recin nacida proyecta la vibracin positiva, masculina, de las fuerzas
diurnas a travs de la vitalidad explosiva del regente planetario de Aries: Marte. Como un recin nacido
humano totalmente absorto en s mismo, el alma de Aries descubre con deleite sus propios dedos de los pies y
de las manos, su propia esencia fsica. Para satisfacer todas las necesidades le basta un grito potente, que los
mayores oyen y contestan inmediatamente. El autntico recin nacido no desconfa, ni teme a nada ni a nadie,
sencillamente porque nunca ha experimentado lo que es una negativa. Asimismo, el alma recin nacida de
Aries deposita una confianza natural y una fe conmovedora en la fuerza invisible del bien que le conceder
milagrosamente la satisfaccin de todos sus deseos.
En el plano terrenal esta fuerza benfica est representada por los padres; en el sentido mstico, por
nuestros Co-Creadores. Y as stos velan tiernamente sobre el alma recin nacida de Aries, as como los
padres velan tiernamente sobre su criatura, protegindola cariosamente de su propia ingenuidad, rechazando
prudentemente algunas de las exigencias que formula mediante la excitada conciencia de que el alma es: l ha
nacido y est aqu. El alma de Aries intuye: YO SOY o Yo existo. Y como el recin nacido simblico,
los hombres y mujeres de Aries permanecen ajenos a las posibilidades de tropezar con accidentes, dolor o
crueldad en el camino de la vida. l o ella aprende estas experiencias negativas slo de quienes han avanzado
ms, de quienes han acumulado rigor, recelo e instinto de supervivencia durante el proceso de crecimiento.
Un adagio religioso postula que todos los recin nacidos, puesto que mueren en estado de pureza, se
transforman inmediatamente en ngeles. Por supuesto! An no han tropezado con el demonio de la tentacin.
Pero si el recin nacido Aries sobrevive, l o ella debe sufrir una y otra vez, como la autntica criatura, el
cruel desencanto de la confianza depositada en quien no corresponda. Vctima de la maldad, de la falta de
compasin o del abandono, el recin nacido se siente sacudido, asustado, solo... y entonces grita con ms
fuerza an para atraer la atencin. De la misma manera (y por las mismas razones) el alma del hombre o
mujer Aries, traumatizada y desilusionada, necesita y busca aceptacin, y sin embargo corteja el rechazo...
con una reaccin emocional violenta ante el abandono.
Las cualidades positivas de Aries son una inocencia y un asombro conmovedores, una fe ciega y un coraje
descarnado. Expresadas en forma negativa pueden transformarse en egocentrismo egosta, desconsideracin,
agresividad y accin impulsiva que se desentiende de las consecuencias.
Para el alma de Aries, el amor es una necesidad vital, que da por supuesta, porque para su conciencia en
paales el amor es sinnimo de la existencia misma. Por tanto espera instintivamente y acepta gozosamente la
devocin, pero no sabe muy bien cmo retribuirla. Aries exige amor, porque sin amor muere, como el recin
nacido. Cuando el abandono emocional puede implicar (simblicamente) la muerte, incluso la insinuacin del
mismo puede producir un pnico desmedido y un terror inexplicable, que slo se sosiegan con reiterados
esfuerzos por apaciguarlo. Aries necesita que le recuerden siempre que si llega el invierno... el milagro de
la primavera no puede estar lejos.

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El misterio, de amor de Tauro


La conciencia espiritual en vas de desarrollo del hombre o la mujer entra a continuacin en el elemento
Tierra. A nivel de Tauro, el alma del recin nacido simblico se ha convertido, alegricamente, en un beb
sano, rollizo, y ahora se relaciona con las fuerzas nocturnas reflexivas femeninas y ha aprendido a dormirse a
la hora apropiada, y a despertarse luego en un clima de comodidad prevista.
Ya no grita sin razn, intimidado por el miedo o la soledad... ni vocifera para que satisfagan todas sus
necesidades, como en la etapa ariana. Ha descubierto que los padres complacern todos sus deseos. En la
etapa de Tauro, el alma, como el beb humano, se conforma con permanecer tranquila y pacientemente
sentada en su sillita, aguardando el pan cotidiano con silenciosa, confiada y segura expectacin.
El Toro tambin ha aprendido a valerse del buen comportamiento para cosechar ms placeres, ms favores
de los padres y otros adultos. Las sonrisas y la obediencia son recompensadas, y Tauro no olvida lo que ha
aprendido, aunque el aprendizaje haya sido doloroso y lento. Todava esencialmente ajeno a todo lo que est
fuera del entorno inmediato, el hombre o .la mujer Tauro (como el beb Tauro simblico) encuentra la
felicidad en el crculo de la familia y en lo tangible... en lo que conoce como familiar ms que en-el mundo
exterior extrao y bullicioso.
A travs de la experiencia de Tauro, el alma beb descubre el deleite de emplear los sentidos del gusto, el
olfato, la vista, la audicin y el tacto. Huele y mastica simblicamente, y escucha todos los juguetes, as como
los toca en esta primera experiencia del alma como signo fijo del organizador. Como los bienes personales
producen felicidad, este hombre o mujer se aferra a ellos, los acaricia y se complace en llamarlos propios.
Tauro dice: YO TENGO. sta es la etapa del osito o la manta reconfortante (que volver a aflorar,
fugazmente, en la vibracin de Cncer). En la etapa de desarrollo de Tauro, el alma beb depende
inmensamente del contacto fsico con los seres queridos, que la alzan, la miman, la besan y la abrazan. Y el
Tauro gobernado por Venus (guiado por Pan-Horus) responde con gorgoteos y risitas de xtasis, y entiende el
afecto slo mediante la sensacin de que lo tiene cerca. El beb concreto es ferozmente posesivo cuando se
trata de sus juguetes y de la atencin de sus padres, se derrumba cuando cree haber perdido a los unos o los
otros, se resiste tenazmente a compartirlos, y as es como el hombre o la mujer Tauro se comporta respecto de
su cuenta bancaria y su consorte.
Las cualidades positivas de Tauro son la tenacidad, la paciencia, la perseverancia y la conviccin. Expresadas
en su forma negativa se transforman en la obstinacin, el prejuicio ciego y la sinrazn.
Para el beb jocundo, dogmtico, que simboliza al alma de Tauro, el amor es el afecto fsico, que se da y se
recibe sin cuestionamiento. Como el beb asocia el amor con todo el placer y la dicha, se regodea en l con
una satisfaccin desprovista de complicaciones, animal. Por tanto, Tauro acepta y retribuye el amor con los
sentidos... pero an no ha aprendido a analizar su autntico mrito y valor.

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El misterio de amor de Gminis


En la experiencia del alma de Gminis, el beb simblico de Tauro entra en el mundo del nio que hace
sus primeros pinitos, y vuelve a experimentar, como en el nivel de infancia de Aries, las fuerzas diurnas
positivas, masculinas. Por primera vez, el alma llega a la etapa del comunicador mutable, toma conciencia de
su propia mentalidad, se da cuenta de que no est sola en el Universo. El alma nio de Gminis aprende a
comunicar sus necesidades mediante el lenguaje, aprende a formar palabras y a hilvanarlas, en tanto los
padres y las dems personas escuchan atentamente, disfrutando de cada nuevo sonido. Hablar le resulta
divertido porque toda la atencin se centra en l (o ella). Tiene una nueva aptitud para gatear o hacer pinitos
hasta el bote de las galletas, sin gritar como Aries ni esperar como Tauro, y esta independencia que acaba de
descubrir es embriagante. A los Gminis los emociona el conocimiento que ahora tienen a su alcance, y por
eso le gritan YO PIENSO! a todo el mundo, muy excitados.
El nivel de conciencia del nio simblico le ensea al alma de Gminis que el carcter tiene dos caras, una
dualidad o bipolaridad que es necesario armonizar para poder entablar una relacin afortunada con los dems.
Experimenta el primer ramalazo de desdicha cuando choca violentamente con la disciplina, mientras intenta
fusionar las personalidades gemelas dormida y despierta. Puesto que Gminis anhela sbitamente ciertos
placeres que residen fuera del hogar y la familia, el alma nio es castigada a menudo porque intenta enfrentar
simblicamente ciertos peligros cuya existencia an no sospecha. Asimismo, los hombres y mujeres Gminis
sienten que el mundo los invita a emprender su exploracin, y quin sabe qu encontrarn en l! Dotado de la
flamante capacidad mental de razonar y deducir de relacionarse el Gminis empieza a desear cosas que
estn ms all de las que ya ha visto, y a soar con ellas.
La mitad del alma de Gminis sigue siendo un beb inseguro, que necesita el entorno familiar. La otra
mitad es un nio anhelante, cuya curiosidad se encauza hacia las mltiples maravillas ignotas que estn fuera
del alcance tangible. El alma de Gminis ya ha experimentado el Fuego y la Tierra y aprende a lidiar por
primera vez con el elemento Aire. Y as es como esta personalidad gemela experimenta las cosas, con ojos
resplandecientes y el corazn desbordante de esperanza. Cada nueva jornada activa la mente de Gminis con
su magia oculta, ahora ms cautivante que los juguetes desechados y el clido crculo del afecto parental. Lo
que el hombre o la mujer Gminis ve por la ventana es un edn prohibido donde todos los anhelos yacen
envueltos en el misterio, mientras el planeta regente Mercurio (el mago) muestra el camino seductor que se
extiende ms all.
Las cualidades positivas de Gminis son la versatilidad, la perspicacia mental, la rapidez de percepcin,
el razonamiento deductivo y la flexibilidad. Expresadas en su forma negativa se convierten en la
impaciencia, la charlatanera, la superficialidad, la ambigedad, la falta de fiabilidad y el
autoengao.
Para el nio Gminis, el amor ha perdido parte de su primitiva naturaleza prodigiosa. En esta etapa sigue
siendo necesario, ms de lo que se piensa, pero ahora hay que buscar algo ms emocionante que el amor. Es
el amor el que os retiene, el que os tironea y os impide salir disparados en direccin a la vida? Entonces el
amor es placentero, pero tambin restrictivo. Los hombres y mujeres Gminis no han cesado de necesitarlo o
desearlo, pero cuando el amor se convierte en una barrera para su libertad lo desechan apresuradamente,
olvidan su tibieza y la seguridad que brinda... y no piensan que podran extraviarse y no encontrar el camino
de regreso al hogar.

20

El misterio de amor de Cncer


El nio es ahora un pber, y el alma ha evolucionado hasta la etapa de Cncer: flota entre la infancia y la
madurez, anhela ser adulto y sin embargo vacila en pasar al otro lado. Cncer vuelve a avivar la conciencia de
las fuerzas nocturnas negativas, femeninas y reflexivas. Pero esta segunda experiencia de la noche est
fusionada con una sensacin nueva, ms rica e incluso ms sensual (que era slo una inspiracin potica, y
todava no una realidad autntica, en el nivel anterior de Tauro), porque se ha producido un cambio de
estacin. El despertar de la primavera se ha ahondado en un sueo de una noche de verano con toda su belleza
madura y fragante para estos hombres y mujeres, estos Obern y Titania, de Cncer.
Ahora la melanclica y sensible alma pber vacila entre la dependencia infantil y el mundo
enloquecedoramente seductor y tentador de los adultos (qu significa ser hombre o mujer?). Esto se expresa
deliciosamente en los experimentos entre los mundos humano y ferico del famoso clsico del Tauro
Shakespeare. Puck, el simblico pber Cncer, observa a los adultos (humanos) en el entorno, y es
prodigiosamente sensible a todo lo que ve y oye. Pero este mundo adulto, material, que l espa con tanta
vehemencia, exhibe vislumbres de frecuentes desilusiones.
Y por ello los sueos de Cncer estn llenos de sobresaltos, hacen que el Cangrejo clame en la noche, y
que a veces saque del armario el viejo y simblico osito de Tauro y lo abra& fuertemente cuando nadie lo ve.
Tal como les sucede a los hombres y mujeres de Cncer, los estados de nimo cambiantes de los pberes
cabales los intrigan a stos tanto como a sus familias. Pero estos terrores son muy concretos para los Cncer,
quienes temen que la madurez implique la prdida de la seguridad de la que disfrutan junto a sus padres y
sobre todo junto a la madre. Los futuros extraos se preocuparn tanto por los Cncer y los amarn tan
incondicionalmente como la madre? Cncer sospecha que no.
Incapaces de explicar sus aprensiones, los Cangrejos se tornan reservados, suean a solas... o se esconden
y se enfurruan, imaginando que nadie los entiende. En el nivel de Cncer, la posible prdida de la proteccin
parental obsesiona al inconsciente. Cncer ya ha aprendido lo que es la prdida. Quiz los amigos de la
infancia se han mudado, la familia ha cambiado de residencia, el viejo barrio con el que estaba compenetrado
ha desaparecido. El mundo ya no es tan emocionante ahora que el Cangrejo intuye sus trampas ocultas. Los
hombres y mujeres Cncer pberes saben que la maduracin les producir infaliblemente aflicciones
inesperadas, y por ello se aferran a aquello en lo que saben que pueden confiar: el ayer.
Como las nuevas sensaciones son muy agudas, Cncer ve una combinacin de tragedia y comedia en la Vida
a medida que sta se expande en su conciencia a lo largo de su primera incursin por el sensible elemento
Agua. Igualmente a pesar de su timidez innata, el alma de Cncer no se dejar relegar a segundo plano,
porque sta es la segunda experiencia como lder cardinal, que puede trocar el miedo ilgico en cautela
sensata. Los Cangrejos desean tanto la Luna llena como la nueva, slo tienen una conciencia parcial de lo que
anhelan... y son renuentes a averiguarlo. Qu reserva el maana? El sentimiento empuja el alma Cncer
pber a las lgrimas. Impulsados por la necesidad de ocultar sus verdaderas emociones, los Cangrejos dicen:
yo SIENTO, y despus para que nadie sospeche que sienten tan vehementemente, bromean, creyendo
engaar a los dems. Si al hombre o mujer Cncer no se lo trata con ternura en esta etapa crucial de la
evolucin del alma, desarrolla un caparazn permanente duro y protector para defenderse del mundo cruel.
Las cualidades positivas de Cncer son la imaginacin, la tenacidad, la ternura, la sensibilidad. la solicitud y
la cautela. Expresadas en su forma negativa se transforman en mezquindad, irritabilidad, melancola, avaricia
y cobarda, comportamiento posesivo y nimo taciturno.
Para el Cncer, as como para el verdadero pber inseguro y sentimental, el amor ha vuelto a asumir
importancia, por encima de todo. Pero ahora es sinnimo del hogar, que representa la seguridad emocional... y
la necesidad de amor es tan grande que debe encubrirse tras las lgrimas afligidas y la risa lunar.

21

El misterio de amor de Leo


El alma pber de Cncer se transforma con brillo sbito en un adolescente simblico que la vibracin de Leo
transporta a la primera expresin de confianza en s mismo y de orgullo por su individualidad. Ahora el alma
sabe (o cree saber) quin es a medida que Leo siente la atraccin de las fuerzas diurnas masculinas y positivas
y del Fuego, con ms intensidad an que en el nivel de Aries. El mundo pertenece al Len --o a la Leona y
por tanto el o la adolescente Leo contempla su imagen en el espejo, admira lo que ve y formula el noble
juramento: YO HAR. El verano ha hecho eclosin en un florecimiento de furiosa belleza, con tardes
perezosas y sol radiante, a medida que Leo se desplaza hacia la conciencia de Si desde el significado bipolar
de la afectacin de Cncer.
El idealismo de la 'juventud excita el corazn del Len e inflama su sangre con el naciente conocimiento de
la sexualidad. stas son dos ansias poderosas que despiertan dudas ntimas y personales acerca del propio
valor, dudas que a su vez se ocultan tras una fachada de vanidad. El alma de Leo sabe qu hacer con esta
segunda experiencia en su condicin de organizador fijo. y la utiliza con aparente confianza para aleccionar a
los dems, para asumir el control de su propia vida y para gobernar a aquellos que necesitan la proteccin de
Leo. Sin embargo, el hombre o mujer Leo, como el adolescente de carne y hueso, sigue buscando que lo
tranquilicen con halagos, sigue encogindose de miedo cuando lo ridiculizan, porque an no es un hombre
cabal una mujer cabal a pesar de su aplomo exterior.
El alma ya ha pasado por las dolorosas experiencias de la primera y la segunda infancia, de la niez y la
pubertad, as que Leo asume el mando con compasiva consideracin para ayudar a los ms vulnerables. En su
configuracin de Leo, el alma no desea realmente oprimir a los indefensos. Las lgrimas derramadas en los
niveles de Aries, Tauro, Gminis y Cncer han grabado en la memoria de Leo la generosidad de espritu. Sin
embargo, aunque los Leo han aprendido a tolerar y perdonar a los enemigos, an no han aprendido a respetar
la sabidura de los mayores. El Leo, como el verdadero adolescente, cree saberlo todo, y no soporta a quienes
ponen en tela de juicio su nuevo conocimiento mundano. El alma de Leo venera al Sol, porque el Sol es el que
gobierna a Leo, es la fuente de toda la vida... y de su fuerza de Len. Leo admira y es admirado, ama y es
amado. Cuando comienza la vida social, brotan los pimpollos del romance... que finalmente florecen. El
primer amor es clido y refulgente, y le produce al adolescente Leo una mezcla de euforia y desencanto. El
podero vertiginoso de su virilidad (o feminidad) le produce a Leo una sensacin de dignidad e importancia
personales... a travs del sexo opuesto. Los Leones y Leonas ya no deben vivir reprimidos por la sofocante
autoridad de la orientacin parental. Han atravesado el puente que une la infancia con la edad adulta. Intuyen
las responsabilidades de la madurez, pero stas an no se han convertido en una carga. La vida es toda fulgor
solar, el pasado tenebroso ha quedado atrs, el milagro del futuro contina pendiente... y el presente es un
momento ideal para la diversin y la distensin. Leo resuelve arrogantemente que el mundo necesita de su
recin descubierta sabidura, y est ms que dispuesto a suministrarla. Slo mediante el ejercicio de una
autoridad indiscutida sobre los nios menores (las almas ms dbiles y an no liberadas) el hombre o la mujer
Leo puede conservar durante esta experiencia la imagen necesaria de superioridad y amor propio.
Las cualidades positivas de Leo son el calor humano, la generosidad, la nobleza, la fuerza, la lealtad, el
liderazgo y una mansa y sosegante ternura: el carisma protector del hermano o la hermana mayor. Expresadas
en su forma negativa se convierten en la arrogancia, el falso orgullo, la vanidad, el despotismo, la soberbia... y
la promiscuidad romntica.
Para el Leo que se encuentra en la etapa simblica de desarrollo adolescente, el amor es el romance
radiante, el cantar de los cantares, la materializacin de todos los ideales y de la belleza. Leo est enamorado
del amor y de s mismo... o de s misma. Los Leones y Leonas dispensan afecto generosamente slo porque
experimentan un gran placer al ser tan soberanamente magnnimos, y exigen gratitud y respeto de los amados
y se indignan si el amor los obliga a' comportarse a su vez con humildad... pues todava no comprenden su
profundidad, ni la belleza implcita en el sacrificio del yo.

22

El misterio de amor de Virgo


El alma juvenil de Leo no tarda en intuir que el verano llega a su fin... y por primera vez toma conciencia,
compungido, de la proximidad de la cosecha, todo ello cuando se expresa en su alma ese veranillo de San
Martn que es Virgo, las fuerzas nocturnas, negativas y femeninas, vuelven una vez ms, y le recuerdan a l o
la Virgen (cuya personalidad ms profunda ha sobrevivido intacta a los efmeros romances de la juventud)
que la madurez trae consigo el deber austero y la responsabilidad. YO ANALIZO, dice Virgo a la
defensiva, mientras se esmera por alcanzar la perfeccin.
Ahora el alma en desarrollo se ha convertido, por primera vez, en un adulto, que se siente frustrado porque
lo obligan a ceirse a las reglas y restricciones de la sociedad, pero que se somete mansamente, con innata
cortesa. Estos hombres y mujeres han descubierto que para recibir lo que necesitan deben servir de alguna
manera a los dems. La vibracin de Virgo ensea que el individuo debe trabajar y ganar dinero, debe ser til,
para poder distraerse libremente. En esta segunda experiencia con el elemento Tierra, que tambin lo es con
un comunicador mutable, los relojes y horarios asumen una gran importancia. El primer empleo es
decepcionante. Las exigencias del trabajo o el estudio obligan a archivar las ideas y los ideales. Ahora no hay
tiempo para soar. El Virgo consagra todos sus esfuerzos a descollar en los estudios, a salir a flote en la feroz
competencia del mundo empresario. El aprendizaje y la competencia son imperativos: la supervivencia se ha
convertido casi en una obsesin.
Las almas de Virgo, como los jvenes adultos de carne y hueso que ellas simbolizan. ven muchas cosas
criticables en torno, odian secretamente la prdida de la inocencia infantil y no tienen ideas claras acerca de lo
que les aguarda. Acaso slo es ms trabajo, ms estudio y ms responsabilidad? De ser as, la vida es en
verdad algo serio, que habr que enfrentar lo antes posible con espritu realista. Se hace tarde. En este nivel de
Virgo, los defectos e imperfecciones humanos asumen una importancia exagerada. Porque, si Virgo no recoge
una cosecha fructfera, ni ellos ni los dems podrn seguir viviendo. Estamos a fines del verano, a comienzos
del otoo, y el fro invierno acecha a la vuelta de la esquina. Por qu toda esa otra gente sigue riendo y
jugando all fuera? Virgo se inquieta y se preocupa, y se pregunta cmo podr advertir a los irresponsables
que la estacin del placer se acerca a su fin. El corazn sigue siendo puro y est poblado de silenciosa
esperanza, pero ahora la mente empua las riendas.
Los anteriores entusiasmos de Leo han sido sustituidos por la resignacin y los ensueos silenciosos. El
miedo a la dependencia genera en Virgo la obstinada determinacin de no perder tiempo ni eludir deberes,
con la conciencia siempre alerta y a la expectativa, con anhelos de progresar. Aunque regida nuevamente por
Mercurio, el alma ya ha aprendido a no desperdigar las fuerzas vitales como lo haca en el nivel de Gminis.
Como la Virgen simblica, Virgo se balancea sobre el filo de la conciencia, y pronto contestar a la estentrea
llamada del autntico regente de Virgo, Vulcano, que an no ha sido descubierto por los astrnomos, pero
que est suficientemente prximo al descubrimiento como para haber comenzado ya a irradiar dbilmente su
influencia pulstil sobre todas las almas Virgo-Virgen.
Las cualidades positivas de Virgo son la lucidez, el discernimiento, la cortesa, el comportamiento servicial, el
espritu prctico y la honestidad consigo mismo. Expresadas en su forma negativa se convierten en
maledicencia, testarudez, timidez, pesimismo, complejo de inferioridad y bizantinismo.
El alma Virgen ha llegado a su aspecto narcisista: recuerda a medias los fuegos candentes de la juventud, pero
como an no ha despertado slo intuye vagamente la pasin que le aguarda, y que pronto le ser revelada por
Vulcano. Para los Virgo, el amor implica la entrega de la personalidad, un misterio que prefieren no resolver.
Por tanto encauzan su energa hacia la preeminencia en el trabajo... y aunque estos seres brindan una mansa
devocin, el autntico significado del amor sigue latente en el corazn del Virgen.

23

El misterio de amor de Libra

El alma en vas de desarrollo se aparta del sendero solitario de la autodisciplina de Virgo y se proyecta
nuevamente hacia las fuerzas diurnas positivas, cuando la vibracin de Libra la invita seductoramente a
aceptar, por tercera vez, el desafo del liderazgo cardinal. En la conciencia de Libra, el alma ya ha madurado
totalmente, y conoce el sol y la sombra. Mientras luchaba por alcanzar la madurez lucha sta que culmin
en Virgoaprendi que en el mundo (y en los seres humanos) existen la noche y el da, el bien y el mal, la
oscuridad y la luz. Ms all de esto, a Libra lo consume la bipolaridad enigmtica del macho y la hembra.
La experiencia les ha enseado a los hombres y mujeres Libra a juzgar equitativamente a sus semejantes.
Hasta el nivel de Libra, el alma se preocupaba primordialmente por s misma. Ahora su inters se expande
para abarcar, por primera vez, la conciencia de que necesita relacionarse con otros seres humanos. Ahora el
alma est pertrechada con las lecciones de cinco niveles anteriores, y se halla en condiciones de guiar con
espritu lgico y con fuerza. Libra se comporta con una amalgama de sabidura compuesta por los
conocimientos que adquiri al realizar una incursin por el AGUA y al experimentar dos veces el FUEGO, la
TIERRA y el AIRE. YO SOPESO, dice Libra, que se enorgullece de ver ambas versiones. Como la
conciencia de Libra no soporta la injusticia, sus decisiones son difciles y arduas. Nace un sentimiento de
justicia social, y frente al prejuicio o la intolerancia, Libra entabla a menudo interminables discusiones, en las
que emplea la fra lgica que aprendi en Gminis y aguz en Virgo. Pero esta actitud es mitigada por una
flamante conciencia del valor de la persuasin. Libra ha adquirido la cualidad de la simpata, que segn ha
descubierto es un recurso seguro para triunfar, de modo que emplea sagazmente una voz melosa y una sonrisa
deslumbrante para halagar a los dems y salirse con la suya.
Libra tiene cada vez ms conciencia de la belleza de la armona... en la msica, en el arte y en el romance.
Como los Libra recuerdan inconscientemente su soledad de Virgo, experimentan el despertar de un profundo
y primigenio anhelo de encontrar pareja. El alma de Libra, sentimental pero prctica, comprende
instintivamente que necesita llevar a alguien a su lado, en el amor y los negocios, para equilibrar la vida y
satisfacer el deseo de armona del regente de Libra, que es Venus. Sin embargo, en el elemento Aire de Libra
no es fcil encontrar pareja para el amor. Cuando se pesan y equilibran los vicios y virtudes de los posibles
consortes en los platillos de la Balanza de Libra, a menudo se descubren carencias que generan la angustia de
la indecisin emocional. Pero mientras tanto el hombre o la mujer contina la bsqueda incansable de un ser
con el cual compartir las alegras y las penas. Algn da se disipar la estacin tan amada del otoo, la
primavera recordada con tanto cario ha quedado muy atrs, y hay algo que Libra sabe: no deber estar solo o
sola, cuando llegue el invierno. Y as los Libra reaccionan ante la belleza del crepsculo, tristemente, con la
sensacin simultnea de que, no obstante su magnificencia escarlata y dorada, anuncia la proximidad de otra
noche del alma.
Las cualidades positivas de Libra son la justicia, la inteligencia, la simpata, la dulzura y el equilibrio
emocional. Expresadas en su forma negativa se convierten en pereza, morosidad, indecisin, espritu
polmico, hedonismo y comportamiento temperamental.
Para Libra, el amor es una unin de las mentes y los corazones, ni demasiado apasionada ni demasiado
desapegada: un feliz trmino medio que se debe compartir equitativamente. Pero estas almas se hallan tan
cautivadas por la belleza superficial del amor que no pueden sondear cabalmente sus implicaciones ms
profundas. Slo comprenden que aman. An no se les ha ocurrido preguntarse por qu.

24

El misterio de amor de Escorpin


Al entrar en su segunda experiencia en el elemento Agua, el alma ahora madura recibe
con beneplcito la oportunidad de meditar mediante un retorno de las fuerzas nocturnas
negativas y femeninas de la conciencia de Escorpin. A nivel pblico, Escorpin es inmensamente capaz de
cumplir con sus deberes ahora harto conocidos, en su condicin de organizador fijo. A nivel personal, a
Escorpin le inquieta descubrir que enfrenta por primera vez el portentoso misterio de su propia existencia.
De dnde ha venido? A dnde va? Por qu est aqu? Escorpin debe desgarrar el velo de la vida, a
cualquier precio, para apaciguar su espritu desasosegado, sbitamente emancipado de su anterior
preocupacin exclusiva por las necesidades terrenales, en tanto clama: YO DESEO!.
El alma de Escorpin sabe mucho... pero es ms an lo que intuye y todava no puede definir. La vibracin
de Escorpin genera una necesidad tan apremiante de explorar lo desconocido que hay que sepultarla bajo
profundas capas de manso raciocinio, pues de lo contrario consumira la mente y devorara el alma. Las
lecciones muy presentes de la placidez y el juicio imparcial de Libra han determinado que Escorpin se cuide
mucho de expresar opiniones a quienes podran descalabrarlas. El fuerte instinto de supervivencia de
Escorpin procede de un arraigado temor a que lo destruyan si no se pertrecha de antemano. Cada derrota que
sufre Escorpin no hace ms que reforzar la ntima conviccin de que ante todo debe ser leal a su propia
integridad personal. Porque Escorpin intuye que si pierde su personalidad, lo pierde todo.
En el nivel de conciencia de Escorpin, el alma descubre por primera vez la relacin que existe entre el
nacimiento, la muerte, el sexo y la verdad religiosa. Escorpin sabe que, de alguna manera mstica, todos
estos elementos se hallan entrelazados. Por tanto, el sexo se convierte en algo ntimamente explorado con una
pasin que no conocen quienes se encuentran detrs o delante de la etapa de desarrollo de Escorpin. Aunque
Escorpin slo confa en el amor despus de que ste ha demostrado ser digno de semejante confianza,
cuando se consagra a otra persona su lealtad es inamovible y eterna. Escorpin siente la necesidad vehemente
de protegerse a s mismo y de proteger a quienes ama de todo dao, y por ello se siente obligado a reclamar
ojo por ojo y diente por diente como garanta de que no volvern a maltratarlos.
Mediante la sutil influencia del planeta regente Plutn, el alma de Escorpin asimila la experiencia de la
muerte a medida que desaparecen amigos y parientes, y esto acrecienta la necesidad de buscar an ms a
fondo el conocimiento sepultado en el inconsciente silencioso. En tanto que el espritu de Escorpin se
remonta por las alturas como el guila, desafiando la gravedad, los deseos y las pasiones mundanas se
intensifican y lo obligan a poner en tela de juicio su propia dignidad. Ultrasensible, pero ya capaz de disfrazar
totalmente esta sensibilidad, Escorpin descubre ahora el poder asombroso de su propia mente, la voluntad
silenciosa, y la emplea secretamente, para que los dems no aprendan a ejercitar el mismo poder sobre l... o
ella. La conciencia de Escorpin es el perodo de prueba del alma.
Las cualidades positivas de Escorpin son la lealtad, la fuerza de voluntad, el magnetismo, la amabilidad, la
clarividencia y un autocontrol prodigioso. Expresadas en su forma negativa se convierten en crueldad,
fanatismo, venganza, sadismo, recelo y autoaborrecimiento.
Para los hombres y mujeres Escorpin el amor es una llama devoradora, digna de cualquier sacrificio... y
deben triunfar sobre su desafo. Sexualmente desinhibidos, pero con temores emocionales y recelos mentales,
se esfuerzan desesperadamente por fusionar las vibraciones fsicas y espirituales del amor, con una extraa
mezcla de erotismo y pureza. Sin embargo, la satisfaccin del deseo no hace ms que dejar al alma de
Escorpin con la apetencia de algo ms trascendente.

25

El misterio de amor de Sagitario


El alma en vas de desarrollo sale de la larga noche de la meditacin de Escorpin y se vuelve nuevamente
esperanzada hacia las fuerzas diurnas positivas y masculinas, en tanto une el otoo con el invierno mediante
la conciencia de Sagitario. Ahora experimenta por tercera vez las vibraciones del comunicador mutable, y
responde por ltima vez al elemento impulsivo del Fuego. En Sagitario, el hombre o la mujer se ha convertido
en un filsofo escptico, en un profeta renuente, que an no conoce con certeza las respuestas definitivas al
enigma de la vida. De modo que el Arquero indaga ms a fondo, con lgica penetrante y candor embarazoso,
para convalidar el aserto de Jpiter: YO VEO.
Ya es hora de que el alma tome conciencia una vez ms de su propia dualidad. Sagitario experimenta el
deseo compulsivo de explorar su propia mente y de tratar de desentraar los secretos del comportamiento
humano en la etapa filosfica del estudio avanzado. Sin embargo, una parte de esta alma aborrece los
implacables requisitos de una educacin cada vez ms compleja y anhela hacer novillos y evadirse de la
exigente escuela krmica de la vida. l o ella se zambulle desde las alturas del supremo optimismo y de
la fe ciega hasta los abismos del cinismo sarcstico. Primeramente frvolo y alegre, despus serio y solemne,
Sagitario es el Centauro, mitad hombre y mitad caballo, que enfila las aguzadas flechas de la curiosidad
directamente hacia la diana del conocimiento buscado. La bsqueda sagitaria de la verdad transporta a esta
alma por el laberinto del concepto religioso, virando del atesmo descarnado al fanatismo espiritual, hasta
desnudar el baluarte del dogma eclesistico... que acepta o rechaza, parcial o totalmente.
A veces Sagitario retoza como un payaso torpe, con una despreocupacin irresponsable por el futuro. 'A
veces medita seriamente, muy por encima de sus pares, y ms all de stos. En la etapa sagitaria, el alma ha
llegado al trance simblico del retiro. Movidos por su planeta regente, Jpiter, los Arqueros ansan viajar,
calentarse bajo soles extraos, ver y aprender de otros pases, pueblos e ideas. Aunque se someten a
regaadientes a las obligaciones del trabajo, el deber y la responsabilidad, esta restriccin fastidiosa a la
materializacin de sus sueos los pone muy impacientes.
Para encubrir su constante inquietud espiritual, los Sagitarios adoptan una pose histrinica, teatral, que les
permite distraer a los dems con una mezcla de farsas divertidas y trgicas, mientras permanecen en
condiciones de seguir aplicando su mtodo de indagacin socrtica respecto de sus propias almas, detrs de
sus mscaras. En este nivel queda poco tiempo para proceder con tacto, mientras Sagitario arremete para
descubrir las verdades antes de que termine la Vida. El otoo toca a su fin, soplan los primeros vientos
invernales... y el clima estimulante invita al Arquero a tentar al destino, para demostrar que el hombre es ms
fuerte que la Naturaleza. An no se ha impuesto la reclusin propia de la estacin invernal. Y por ello
Sagitario disfruta de cada copo de nieve, mientras se interroga sobre su intencin y su origen... y despus los
comprime en una bola que arroja sin aviso previo para derribar la solemnidad de las almas ms circunspectas.
Aunque intuye que le aguarda la vejez, con sus prometidas recompensas de sabidura y paz, el alma
recuerda con demasiada nostalgia los tiempos despreocupados de la juventud perdida... la primavera y el
verano... y no puede resignarse de buen grado a su madurez inevitable.
Las cualidades positivas de Sagitario son el optimismo, el candor. la alegra, la lgica, la honestidad, la
audacia y el entusiasmo. Expresadas en su forma negativa se transforman en la temeridad, la confusin
emocional, la negligencia, la falta de tacto, la grosera y la inconstancia.
Sagitario, que ha llegado a la edad intermedia simblica del alma, debe descubrir el amor ahora... o lo perder
para siempre. Cuando los Arqueros buscan una pareja para todos los tiempos, se dejan cegar por el idealismo
y el desafo del amor, y por tanto los hiere la realidad de ste, pues su indagacin ansiosa an no los ha
llevado a buscar el amor donde en verdad se encuentra: dentro de sus propios corazones.

26

El misterio de amor de Capricornio


Ahora las rfagas heladas del invierno se hacen ms insistentes, y obligan al alma harta de experiencias a
replegarse simblicamente en el refugio del crculo familiar, y a someterse de nuevo a las fuerzas nocturnas
meditativas, negativas y femeninas. En el nivel de conciencia de Capricornio, el alma siente por cuarta y
ltima vez las poderosas vibraciones del liderazgo cardinal. Pero esta vez dicho liderazgo la conduce a travs
del elemento Tierra estable, desde una posicin de fuerza en el interior del hogar, junto al fuego de la
chimenea. Por qu la Cabra habra de exponerse a las glidas temperaturas exteriores, slo para hacerse ver y
or... aplaudir y alabar?
Las almas de Capricornio, que ahora estn seguras de su capacidad y su derecho para asumir el mando, ya
no sienten la necesidad de exhibir u ostentar agresivamente su podero... para conquistar la adulacin pblica
o la seguridad interior. En esta etapa, el alma ha aprendido que la autntica paz emana de adentro. El ttulo de
lder implica una responsabilidad que hay que manejar con la mayor cautela posible, sin que la ejecucin de lo
que es obviamente el propio deber merezca un reconocimiento especial. Ahora los parientes (y sobre todo los
padres) del Capricornio asumen una marcada importancia, para bien o para mal, porque ha llegado la vejez
simblica del alma... y junto con ella la conciencia de las prioridades de la vida, entre las cuales sobresale la
seguridad de pertenecer al grupo. Las emociones del romance y las libertades de la juventud ya no son ni
remotamente tan tentadoras para la Cabra como la comodidad y la satisfaccin que uno encuentra junto con
aquellos en cuyos cuidados puede confiar.
Capricornio est preparado para comunicar la sabidura de Saturno, trabajosamente acumulada, y tambin
est bien predispuesto para ello, pero slo cuando se lo pidan. Como las Cabras saben que es un desatino
obligar a la gente a madurar prematuramente, sonren con la benvola indulgencia de un abuelo carioso
(cualquiera que sea su edad cronolgica) ante las travesuras de quienes an son jvenes de corazn.
Secretamente, el alma de Capricornio anhela renunciar al deber, pero ya est resignada a la certidumbre de
que el idealismo puro no es prctico... y de que el entusiasmo espontneo nunca puede sustituir a la
experiencia. Muy consciente de los peligros de la accin impulsiva, el alma se ha hecho ms conservadora... y
la negativa de la Cabra a diseminar sus esfuerzos o a incurrir en sentimentalismos determina que quienes
nacieron en los elementos de Fuego y Aire la acusen de frialdad emocional. Los Capricornio respetan la
autoridad porque interpretan que la ley es necesaria para proteger los derechos y la seguridad humanos.
Veneran tmidamente a los famosos y los triunfadores porque el regente de Capricornio, Saturno, les ensea a
reverenciar el xito, cuyo precio conocen muy bien.
Aunque las almas ms liberales puedan pensar que Capricornio es austero e inflexible, la vida tambin les
ha enseado a las Cabras su lado humorstico, y sus bromas sutiles estn teidas por la irona de la existencia.
Como los nuevos deberes saturnales que les impone su condicin de consejeros de los necios descansan
pesadamente sobre sus hombros, a veces intentan beber la ltima dosis de los raros placeres de la Vida, que
aceptan serenamente, sin falsa vergenza ni inhibiciones superfluas. Slo despus, cuando vuelve a imperar la
influencia atemperante de la madurez, el Capricornio experimenta una vaga sensacin de remordimiento y
melancola por haber sucumbido a la tentacin de pasiones prohibidas. En la vibracin de esta alma existe la
compulsin de reconocer la necesidad de ser prcticos, como lo confiesa Capricornio: YO UTILIZO. Pero
la benevolencia espiritual atena la severidad de la adustez superficial que impone Saturno, porque la
conciencia del Capricornio trae consigo la comprensin de los errores humanos, nacida de la sabidura que
asimil durante diez etapas de los misterios de la vida... y del amor.
Las cualidades positivas de Capricornio son la tenacidad, la estabilidad, la prudencia, la fiabilidad, la
seguridad y la tranquilidad. Expresadas en su forma negativa se convierten en egosmo, intolerancia, ambicin
despiadada, rigidez, esnobismo, depresin y soledad.
Para Capricornio, el amor es un intercambio apacible y noble de satisfacciones personales. Las Cabras han
aprendido cabalmente la valiosa leccin de que el amor no se mide por el exceso de emociones. Pero como lo
equiparan slo con las exigencias de la necesidad y el deseo mutuos, an no han experimentado la liberacin
de sus anhelos interiores.

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El misterio de amor de Acuario


Al llegar a la iniciacin de Acuario, el alma en vas de desarrollo siente que debe devolver a la vida mucho de
lo que cosech en el camino. Y as comienza una segunda infancia a nivel del Aguador, que vierte su
conocimiento, resuelto a compartirlo, y ansioso por compartirlo, antes de abandonar este planeta para explorar
el excitante mundo de lo desconocido en el ms all.
Acuario siente por ltima vez como organizador fijo las conmociones de las fuerzas diurnas masculinas y
positivas, en la experiencia final del desapegado e imprevisible elemento Aire. El hombre o mujer Acuario,
que es un enigma para sus amigos y parientes, retoza de manera peculiar con los jvenes de corazn, y
decimos peculiar porque su sabidura y experiencia entran en contraste directo con esta conducta liberal y
excntrica. En el pasado dej relegados muchos misterios porque no tuvo tiempo para investigarlos. Ahora los
Acuario deben saborearlos a todos, deben examinar todos los matices por arriba y abajo, a izquierda y
derecha, de buena o mala gana. Les encanta dejar pasmados a quienes los rodean, y sbitamente toman
conciencia de una inexplicable capacidad para atisbar en el futuro. Asombrosamente intuitiva y erizada de
imprevistas vislumbres de imgenes telepticas, el alma de Acuario examina a las personas y las ideas sin
sentimentalismo, y descubre la verdad sin una lgica visible ni un esfuerzo identificable.
En este nivel, el alma tiende a menospreciar la ley y la autoridad porque el espritu vive realmente en el
mundo del futuro. El Acuario sabe que tarde o temprano habr que modificar y adaptar las normas rgidas de
la sociedad actual. Por tanto l (o ella) no ve ninguna razn sensata para respetar lo que seguramente se
transformar maana en algo nuevo y diferente. Si es necesario sublevarse violentamente para implantar la
tolerancia, la fraternidad y la comprensin, el Acuario piensa que el resultado ser digno de semejante
conflicto. Sin embargo, si bien los Aguadores postulan cambios para el mundo (y para sus amigos y
familiares), ellos siguen fijos en sus opiniones personales, cdigos privados y formas de vida, lo cual refleja la
naturaleza contradictoria de su planeta regente, Urano.
Ahora el alma ha adquirido un autntico enfoque humanitario. Para el desprejuiciado Acuario todo ser
humano es un amigo, cualesquiera que sean los valores personales de dichos individuos, porque el Aguador
ha aprendido que l o ella est integrado dentro de la totalidad del gnero humano... y de la Naturaleza.
Sin embargo puede descuidar las relaciones personales, porque estos hombres y mujeres corren en pos de un
idealismo que est relacionado con el bienestar de la sociedad en general. Al igual que la era de Acuario, de la
que ella es un reflejo, el alma imagina en esta etapa un futuro radiante y glorioso que slo se podr alcanzar si
se demuelen las viejas costumbres y las ideas anacrnicas para abrir paso a la conciencia espiritual, mediante
la embestida de la masa acelerada del Karma. Cuando la conducta de Urano ofende a los ms conservadores,
el Acuario individualista desecha su desaprobacin con una carcajada. Los Acuario se sienten seguros merced
a su conciencia intuitiva del futuro, responden YO S a todas las preguntas, y despus se niegan
maliciosamente a explicar cmo lo saben... excepto a los nios, que entienden merced a su propia inocencia el
estado inocente de sencillez al que el alma retorna en la vibracin uraniana de la segunda infancia.
Las cualidades positivas de Acuario son la visin, la individualidad, la tolerancia, la cordialidad, el espritu
inventivo, la originalidad y el genio. Expresadas en su forma negativa se convierten en excentricidad,
neurosis, desapego, distraccin y negativa a cooperar.
Para Acuario, el amor es una emocin autnoma y desprovista de egosmo, que hay que explorar y disfrutar.
El Aguador entiende la envergadura del amor e investiga todas sus dimensiones, pero lo derrocha
negligentemente confundindolo con la amistad. La satisfaccin fsica deja al Acuario emocionalmente vaco
y an anhelante, pues no comprende el misterio de la unidad con la pareja, la verdad ltima del amor. sta
espera silenciosamente, en las sombras, que la descubran. Es el secreto custodiado por Neptuno, ms all de la
comprensin de Urano.

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El misterio de amor de Piscis


As como el alma nace simblicamente en la inocente irreflexin de Aries, as tambin muere
simblicamente o deja el doloroso plano terrenal para ingresar en la compasiva humildad y la
sensibilidad mstica de Piscis. En la etapa del signo solar Piscis, el hombre y la mujer en vas de desarrollo
empiezan a comprender vagamente el secreto del tiempo como un eterno AHORA, capaz de ver (en distinta
medida) el pasado, el presente y el futuro como una sola cosa. Esta es la tercera y ltima incursin del alma en
el elemento Agua sensible su cuarta y ltima vibracin como comunicador mutable y la ltima
experiencia bajo las fuerzas nocturnas negativas y femeninas.
En trminos ideales, cuando el alma ha llegado a la etapa de Piscis, ha alcanzado el esclarecimiento
espiritual en el largo viaje a travs de los misterios del amor que ha experimentado en los once signos solares
precedentes. Si no ha sido as, debe volver a las experiencias vibratorias de determinado signo solar del
crculo astrolgico, para aprender las lecciones que no asimil en razn de haberlas pasado por encima con
demasiada prisa en las anteriores etapas de encarnacin. Pero cada uno de estos retornos comunica una nueva
vulnerabilidad a la leccin de ese signo solar... una nueva avidez interior por aprender su esencia positiva y
desechar la negativa. Desde luego, algunas almas superiores o avanzadas resuelven volver a la Tierra, por su
propia voluntad, despus de haber llegado a la etapa de Piscis, para rescatar a quienes an permanecen en las
tinieblas. Sin embargo, aqu nos ocupamos de la obligacin y la configuracin del Piscis medio.
En el nivel de Piscis, el hombre y la mujer han pasado al menos una vez por las doce etapas de iniciacin, y
muchos han tenido que remontarse atrs y volver sobre sus pasos centenares de veces en el curso de esta
experiencia, porque Piscis es el ms difcil de comprender y conocer a fondo, entre los doce signos solares.
Generalmente esta hazaa no se logra la primera vez que se recorre la rueda de la vida, excepto cuando se
hace un vehemente despliegue de deseo y voluntad, lo cual tampoco significa que la proeza sea impracticable.
Pero ste es un camino que, hasta ahora, slo han elegido unos poqusimos individuos. Por ello la astrologa
ensea que Piscis es un alma vieja... y sta tambin es la razn por la cual no todo hombre o mujer Piscis es
el paradigma de la gracia espiritual, y por la cual algunos nadan por aguas peligrosamente prximas a las
llamas del Infierno de Dante. El Pez vive en dos mundos, y experimenta simultneamente el cielo y el
infierno.
Merced a la sabidura secreta de su planeta rector, Neptuno, los Piscis saben que la afliccin y la fealdad no
forman parte del plan divino. Han vislumbrado la belleza de la verdad, y el fulgor de esta visin mstica
genera el anhelo de apartarse de las vibraciones negativas del plano terrenal. Por tanto Piscis elude a menudo
la confrontacin y la tensin y se evade por la ruta de las drogas, el alcohol, los ensueos diurnos, la creacin
artstica, la elaboracin de teoras filosficas, la meditacin o el retiro religioso. Los Piscis pueden convertirse
en maestros, monjes, monjas, msticos, artistas, msicos, compositores, matemticos abstractos y matemticos
muy intuitivos... o pueden optar por zambullirse en las aguas cenagosas del alcoholismo y la drogadiccin, e
incluso de la locura. Se trata de una vibracin difcil y complicada para el alma, porque la experiencia de este
signo solar est preada de tentaciones para el hombre o la mujer Piscis.
Como los Peces han pasado por todo en el nivel inconsciente, sienten una compasin natural por los
problemas de quienes los rodean. El alma de Neptuno est ntimamente familiarizada con las vicisitudes de la
vida, comprende las debilidades de la naturaleza humana, y por consiguiente tiende a apiadarse de las
flaquezas del hombre y la mujer, en lugar de condenarlas. Ello explica por qu estas viejas almas se
convierten tan a menudo en las receptoras de los secretos, tribulaciones, preocupaciones y aprensiones de
todos los dems. Sin embargo, su instinto inicial consiste en volver la espalda a las complicaciones
engorrosas, en todas sus formas. Slo cuando el Pez encuentra el coraje necesario para enfrentar sus propios
problemas con la misma sabidura espiritual que suministra a los dems, se pueden sondear los misterios de
Neptuno.
Mediante esta iniciacin por la muerte (muerte del yo humano) el alma se hace ms condescendiente,
ms benvola, y adquiere la capacidad de entender mejor su autntica relacin con los Co-Creadores... a
medida que Piscis afirma: YO CREO. Para materializar la gloria y la verdad cabales del amor, el Pez puede
recurrir, si as lo desea, a la inocencia de Aries, a la paciencia de Tauro, a la perspicacia de Gminis, a la
percepcin de Cncer, a la nobleza de Leo, al discernimiento de Virgo, al criterio de Libra, a la agudeza de

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Escorpin. a. la honestidad de Sagitario, a la sabidura de Capricornio... y al humanitarismo de Acuario. Pero


a veces estos mltiples fragmentos de conocimientos y talentos secretos slo sirven para confundir a Piscis, y
lo impulsan a seguir el camino ms fcil de la no resistencia pasiva.
Las cualidades positivas de Piscis son la humildad, la compasin, la sensibilidad, la agudeza espiritual, la
comprensin psquica, la clarividencia filosfica y el potencial teraputico. Expresadas en su forma negativa
se convierten en timidez, aprensin, masoquismo, ociosidad, proclividad al embuste y falta de voluntad.
Para Piscis, el amor implica una sumisin generosa del yo a los deseos de la persona necesaria para alcanzar
la Totalidad. El Pez experimenta ms placer cuando da que cuando recibe, se siente ms feliz cuando sirve
que cuando es servido. Sin embargo el enigmtico Neptuno pone a prueba el alma de Piscis con la tentacin
de mltiples experiencias sexuales y romnticas... flotando de un amoro a otro.

El receloso Pez se vale de este comportamiento promiscuo se convierte en un recluso romntico para rehuir
al peligro de que lo pesquen mediante un compromiso emocional profundo o permanente. Pero el hombre o
la mujer Piscis que se resiste a la tentacin de buscar slo el placer del amor para evitar su dolor, recibe una
valiosa recompensa cuando desentraa el misterio ltimo del amor. Entonces l o ella vislumbra por primera
vez, en el curso del cansador peregrinaje del alma, la autntica pasin de fusionar en una trinidad la mente, el
corazn y el espritu, de lo cual resulta un raro xtasis fsico: la lejana promesa primaveral de un milagro, que
el amor formul en Aries, se cumple por fin en Piscis.

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Los planetas
hemos librado una guerra prolongada y cruel mi alma gemela y
yo
perdidas y solitarias, ngeles cados, desterradas de una brumosa,
semiolvidada galaxia de estrellas
atrozmente heridas por la dolorosa arremetida de Marte atrapadas en la red
enmaraada de Neptuno
conmocionadas y desgarradas
por la sbita, tremenda violencia de Urano
torturadas por los inteligentes embustes de Mercurio trituradas bajo el peso
helado del severo, inflexible Saturno que prolong cada hora transformndola
en da
.cada da transformndolo en ao
cada ao transformndolo en eternidades de espera
chamuscadas y casi cegadas
por los estallidos de arrogancia y orgullo del Sol
como Eva y Adn, inmovilizadas e inermes, en lo ms hondo llorbamos...
igualmente luchbamos con implacable furia
trocando golpe por golpe... impulsadas por el redoble de las gigantescas, palpitantes
pasiones de Jpiter
tropezamos en el precipicio de la tentadora demencia de la Luna
para caer, al fin, trmulas de miedo
ante la amenaza del ominoso silencio sepulcral de Plutn consumidas por la pena inconsolable, y
la desolacin
de la angustia ostentamos. .
las heridas y cicatrices de la furiosa batalla yo y mi alma gemela
pero ahora marchamos en sosegada paz
con todos nuestros fragmentos dispersos ntegramente
fusionados, cogidas de la mano... completando el crculo de la serpiente de vuelta en el arco iris piramidal
del ms radiante edn del maana
coronadas por la dulce Venus con la Victoria del Amor que no muri
sino que sobrevivi a la noche de la bsqueda egosta para aguardar el tierno perdn de la
maana
y el amanecer de la comprensin*

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Su signo solar
El trmino signo solar significa que si usted es, por ejemplo, Gminis, cuando usted naci el Sol ejerca su
poderosa influencia a travs de la ZONA DEL ZODIACO (no la constelacin) llamada Gminis... desde el 21
de mayo hasta el 21 de junio inclusive (en todas las zonas horarias de los Estados Unidos durante las ltimas
dcadas; con un da de diferencia, por ejemplo, en Greenwich, Inglaterra). Usted notar que las fechas que
abarcan los perodos de los doce signos solares varan en funcin del libro de astrologa que lee, lo cual puede
confundir al profano. Esta variacin se debe a que la mayora de los astrlogos no quieren desconcertarlo con
la informacin de que el Sol cambia de signo por la maana, la tarde o la noche de un da determinado. Y
entonces le roban ese da de cambio a un signo solar consecutivo y se lo pasan a otro... para emparejar las
cosas. Esto no hace ms que aumentar la confusin. Es muy agradable y fcil fingir que el perodo de cada
nuevo signo solar comienza exactamente a medianoche. Pero no es cierto.
Por ejemplo, si se exceptan las variaciones de los aos bisiestos, el Sol (tanto durante las ltimas dcadas
como actualmente) DEJA Aries y ENTRA en Tauro en algn momento del 20 de abril, en todas las zonas
horarias de los Estados Unidos (pero el 21 de abril en Greenwich, Inglaterra). Es importante que usted sepa
que el 20 de abril contiene AMBOS signos. De lo contrario usted podra pasar toda su vida pensando que es
un Toro, cuando en realidad es un Carnero.
De modo que recuerde siempre que si naci en el PRIMER o el LTIMO da de cualquiera de los perodos
de los signos solares que enumero en este libro, deber averiguar la HORA exacta de su nacimiento, ms la
longitud y latitud del lugar donde naci, para determinar si el Sol haba cambiado de signo o no a esa hora
y en ese lugar.
El trmino signo lunar se refiere a la zona del zodaco (no la constelacin) por donde pasaba y ejerca
su influencia cuando usted naci. El trmino ascendente (a veces llamado signo naciente) identifica al
signo del zodiaco que ascenda sobre el horizonte oriental en el momento exacto de su nacimiento. El
ascendente depende del lugar de la Tierra donde usted naci (longitud/latitud de su lugar natal). Quienes
deseen saber algo ms acerca de estas cuestiones podrn consultar la lista de materiales bibliogrficos que
figura al final del libro.
Una acotacin acerca de los nacimientos registrados en la fecha de una cspide: A menudo, quienes han
nacido en una cspide astrolgica (aquel da durante el cual el Sol cambia de signo) dicen (y creen) que sus
personalidades contienen las cualidades de ambos signos solares. E imaginan que esto se debe a que nacieron
en una cspide.
Por ejemplo, una persona nacida el 20 de enero puede pensar que a veces se comporta como capricorniana,
y a veces como acuaria. Lo mismo vale para todas las personas cspides. Algunos astrlogos os dirn que
ello se debe a que el nacimiento en cspide determina que la persona as nacida exhiba los rasgos de ambos
signos. En mi larga y variada experiencia personal como astrlogo profesional, me he convencido de que esto
sencillamente no es cierto. En todos los casos, sin ninguna excepcin, la persona que cree que su
comportamiento refleja una combinacin de ambos signos solares cspides, se comporta as porque su
Luna o ascendente est en el segundo signo.
Por ejemplo, la persona arriba citada que naci el 20 de enero por la maana es un signo solar Capricornio.
Si este capricorniano se comporta a veces como una Cabra... y en otras ocasiones como un Aguador de
Acuario, ello siempre se debe a que la Luna o el ascendente del capricorniano estaba en Acuario a la hora del
nacimiento... Y NO PORQUE HAYA NACIDO EN UNA CSPIDE. Si una persona nacida el 19 de enero
se comporta siempre esencialmente como una Cabra y nunca como un Acuario la Luna o el ascendente
NO estaba en el signo cspide de Acuario a la hora del nacimiento.
Usted pertenece a un signo solar u otro. Su personalidad no puede compartir y no comparte los dos signos
solares porque usted haya nacido en una cspide. Es cierto que cada uno de los tres decanatos de todo
signo solar (cada signo astrolgico tiene una envergadura de 30 grados y a cada decanato le corresponden
10 grados) confiere su propia variacin a la cualidad del signo solar especfico. Pero sta es una cuestin

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aparte. Si usted es Capricornio, es Capricornio. No es un signo solar Acuario parcial por el hecho de haber
nacido en una cspide. Si de vez en cuando siente que se comporta como un Acuario, puede estar seguro de
que ello se debe a que la Luna o el ascendente estaba en Acuario a la hora de su nacimiento (o tambin es
posible que slo se imagine sus caractersticas acuarias porque lo ha impresionado exageradamente el error
que repiten tan a menudo los astrlogos equivocados).
Es posible que esta imagen le aclare ms las cosas. El Sol que ejerca su poderosa influencia a travs de la
zona del zodiaco llamada Capricornio (por ejemplo), grab las caractersticas de Capricornio en su
personalidad cuando usted respir por primera vez (al programar los miles de millones de clulas elctricas de
su cerebro ms o menos en la forma en que se programa una computadora). Este proceso (que crea su signo
solar personal) es una fuerza tiempo-energa. A falta de un vocabulario ms preciso, el proceso es
relativamente electromagntico. Entonces, para ayudarse a forjar una imagen, usted puede preguntarse si es
posible que en determinado momento una luz elctrica est mitad encendida y mitad apagada. Por supuesto
que no. Una luz elctrica est ENCENDIDA o est APAGADA. No puede estar encendida y apagada al
mismo tiempo. Tampoco el Sol puede ejercer (por razones anlogas) su poderosa influencia a travs de DOS
SIGNOS simultneamente.
Cuando el Sol hace vibrar su fuerza a travs de Capricornio, la hace vibrar a travs de Capricornio. En el
momento csmico exquisitamente cronometrado (que en realidad se puede cronometrar en la Tierra en un
lapso de minutos, utilizando los actuales medios astronmico-matemticos), en ese momento en que el Sol
entra en el signo de Acuario, pasa a irradiar sus poderosas vibraciones a travs de Acuario, y ya no a travs
del signo de Capricornio. Y punto final. La luz no puede estar encendida y apagada al mismo tiempo. El Sol
no puede estar imprimiendo al mismo tiempo las caractersticas de Capricornio y Acuario. Esto es imposible,
tanto desde el punto de vista csmico como desde el astrolgico. La racionalizacin de la rbita de
influencia utilizada por los astrlogos que hacen hincapi en los rasgos combinados del da cspide no se
aplica en relacin con el signo solar. S se aplica en relacin con muchas otras fases y facetas de la astrologa
(incluyendo la actual rbita de influencia de la era de Acuario) tales como los aspectos, etctera, etctera.
Pero NO en el caso de un signo solar.
En cuanto a la Astrologa 13, la humorada del astrnomo contra la santidad y validez de la astrologa, no
hagis caso de ella. Por razones que no puedo detallar aqu por falta de espacio, este concepto de los trece
signos solares, con todas sus connotaciones, es completamente falaz. Os ofrezco la prueba ltima de ello,
mitad en serio y mitad en broma. La Astrologa 13 convertira a la autora de este libro en un signo solar Piscis
en lugar de un Aries. Todos mis amigos y parientes Os dirn que la hiptesis en virtud de la cual yo sera
Piscis es tan falaz que termina por ser hilarante. Tampoco Nelson Rockefeller es un Gminis (en lo cual lo
convertira la Astrologa 13) sino un Cangrejo de Cncer hasta sus ltimas consecuencias. Tampoco Billy
Graham es un Libra (en lo cual lo convertira la Astrologa 13) sino un guila de Escorpin hasta sus ltimas
consecuencias. Y esto es ESTO, queridos amigos y estudiosos de la astrologa. Lo dice un Carnero testarudo
(y no un Piscis discreto y afable)! Amn. Os exhorto a no permitir que esta deliberada semilla de confusin,
plantada por los astrnomos que desean enlodar la cuestin astrolgica, crezca hasta convertirse en uno de los
inmensos baobabs de tinieblas y falsedad negativa de los que nos habla el Principito.

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Perodos natales de los signos solares


ARIES
TAURO
GMINIS
CNCER
LEO
VIRGO
LIBRA
ESCORPIN
SAGITARIO
CAPRICORNIO
ACUARIO
PISCIS

20 de marzo al 20 de abril
20 de abril al 21 de mayo
21 de mayo al 21 de junio
21 de junio al 22 de julio
22 de julio al 23 de agosto
23 de agosto al 23 de septiembre
23 de septiembre al 23 de octubre
23 de octubre al 22 de noviembre
22 de noviembre al 21 de
diciembre
21 de diciembre al 20 de enero
22 de noviembre al 21 de
diciembre 21 de diciembre al 20 de
enero
20 de enero al 19 de febrero 19 de
febrero al 20 de marzo

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Combinaciones
de los signos del amor

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ARIES

GMINIS

Fuego - Cardinal - Positivo


Regido por Marte
Smbolo: el Carnero
Fuerzas diurnas Masculino

Aire - Mutable - Positivo


Regido por Mercurio
Smbolo: los Gemelos
Fuerzas diurnas Masculino

La relacin ARIES-GMINIS
No era realmente la noche del sbado, al menos podra haberlo sido, porque haca mucho
que haban perdido la cuenta de los das; pero siempre que queran hacer algo especial decan
que sa era la noche del sbado, y lo hacan.
Si trabajara en equipo, esta combinacin de signos solares podra volver a vender Manhattan a los indios: con
los cortes de energa, los atracadores, los Metros desvencijados, la basura acumulada y todo lo dems. Por
supuesto, dado que ambos son idealistas, probablemente comprenderan que a los indios los timaron desde el
principio, y terminaran restituyndoles Nueva York a cambio de unos collares de cuentas y una insignia
pacifista, junto con todos los derechos que el hombre blanco le arrebat a su hermano piel roja... si pudieran
cerrar el trato.
Como a Aries y Gminis les gustan las causas nobles, y como comparten el mismo talento para
convertirse en vendedores creativos y perseverantes, pueden ejecutar juntos fabulosas hazaas de ingenio.
Tambin comparten una actitud displicente respecto de la acumulacin de grandes cantidades de poder o
dinero, y quizs esto explica por qu tan pocas veces tienen todo el xito que deberan tener, si se considera la
energa emocional (Aries) y mental (Gminis) que invierten en todo lo que les interesa... por el momento,
quiero decir. Nada retiene el inters de ninguno de estos signos solares durante ms de un minuto. Bueno, a
veces durante dos o tres minutos.
Puesto que Aries bulle con ingenua impetuosidad, y Gminis est resuelto a conquistar la independencia
absoluta mediante la ruptura de todas las ataduras del espritu, es raro que sus actividades recprocas estn
sustentadas por la madurez de pensamiento.
Se podra decir que las cualidades combinadas de la asociacin entre esta configuracin de signos solares
3-11 muestran una imagen de optimismo, salpicada por breves tramos (generalmente muy breves) de
sensibilidad e inseguridades ocultas. Cuando Aries y Gminis fusionan sus naturalezas como vecinos, amigos,
socios, parientes, amantes o consortes, se duplican sus afanes individuales por liberarse de todos quienes
querran inmovilizarlos en una cinaga de normas convencionales y precauciones. Separados o juntos,
parecen jvenes, actan como jvenes... y por tanto, con la mayor naturalidad, a menudo tienen un
comportamiento infantil.
Ahora bien, los nios pueden ser cautivantes y cndidos, y pueden inspirar cario. Tambin pueden ser
involuntariamente egostas, irracionales y desconsiderados. Lo mismo vale para cualquier asociacin
concertada entre este equipo colocado bajo la influencia 3-11. Es preferible que ambos, o por lo menos uno de
los dos, madure eventualmente, porque si no la mayor parte del tiempo que pasen juntos lo dedicarn a jugar
en una montaa de arena, con un par de cubos de colores brillantes y grandes palas, en busca de lo que todos

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saben que ellos son especialistas en endilgarse recprocamente y en endilgarle al resto del mundo.
Bsicamente, tanto Aries como Gminis son honestos especialmente los Carneros pero ambos pueden
embaucarse a s mismos hasta olvidar dnde termina la honestidad y empieza el autoengao. Esto se debe a
que son inocentes o ignorantes quin sabe cul de las dos cosas en lo que concierne a sus propias
naturalezas individuales. En otras palabras, ambos son tan expertos cuando se trata de venderse algo a s
mismos como cuando se trata de vendrselo al pblico en general. Si el producto que venden no es genuino,
casi siempre el Gminis ser el primero en sospecharlo, con la mente aguzada y analtica de Mercurio, aunque
tambin es capaz de embaucarse a s mismo (o a s misma), y seguir imaginando que posiblemente el
producto contina siendo lo que l (ella) pens originalmente que era. En cuanto a Aries, a este signo solar le
resulta tremendamente difcil detectar la diferencia entre lo que brilla tan tentadoramente... y el oro autntico.
El Carnero slo aprende a discriminar despus de reiteradas y dramticas desilusiones y desengaos.
He estado hablando de ellos dos. En realidad, quiz debera referirme a ellos tres, porque aunque Aries
es evidentemente una sola persona, indivisible, con libertad y justicia para todos, todo Gminis es
netamente dos personas, aquella que l-ella es verdaderamente... y la persona que a l-ella le gustara ser. Ya
sabis, los Gemelos. Sumad el ego del Carnero un ente casi autnomo y podra producirse una gran
aglomeracin, con todas estas auras que se mezclan, que se atraen y se repelen, que se fusionan y chocan,
alternadamente. No ser una mala idea que las personas con estos dos signos solares, no obstante su condicin
esencialmente compatible, se separen de vez en cuando y se miren con nuevos ojos desde lejos. As se
despejar parte de la espesa bruma que necesariamente se acumular entre ellas.
Aries arremete instintivamente, convencido de la sinceridad de su causa, as como del triunfo final, y
tiene poco o ningn tiempo para reflexionar sobre los pros y contras de cualquier situacin o problema dado.
A la inversa Gminis sopesa, individualiza y desentraa todas las maniobras y conclusiones posibles con la
objetividad y la lgica fras, informales, que son tan tpicas de los tres signos de Aire (Acuario y Libra son los
otros dos). Sin embargo, es posible que Gminis no tenga espritu prctico, a pesar de todas sus acrobacias
mentales. Gminis puede deducir rpidamente qu es lo que tal vez fallar, pero a menudo resuelve ganar en
ingenio al hado o el destino, e incluso a s mismo (o a s misma), valindose de la inteligente estrategia
mercurial. Hay otras diferencias de criterio entre estos dos.
Aries, influido por un signo cardinal, insistir en marchar a la cabeza, en conducir, en desafiar, en iniciar e
inspirar siempre, con entusiasmo y audacia. El Carnero aceptar prcticamente cualquier idea, sensata o
insensata, que cautive y estimule sus emociones... y a la que su ego pueda asociarse de manera personal. El
Gminis inconstante prefiere asociarse de manera impersonal, y aceptar las ideas que sean afines con el
proceso mental deductivo. Se comunicar mediante la lgica y la sagacidad de la razn de Mercurio, mientras
su autntica personalidad permanece en segundo plano, atenta, sin que quienes son hipnotizados por el
encanto de Gminis sospechen su presencia.
A Aries le gusta cabalgar en el elefante que encabeza la columna y saludar a la multitud, pero los Gemelos
no alimentan el deseo devorador de convertirse en hroes o heronas tachonados de estrellas. Gminis
preferira delegar en otros todos los deberes y obligaciones constrictivos del liderazgo, y mantenerse libre de
responsabilidades, libre para ensayar el mrito de nuevas ideas... para explorar a nuevas personas, nuevos
lugares y cosas. El anlisis geminiano es menos vehemente que el de Aries, porque la computadora mental lo
examina todo serenamente en busca de posibles defectos... o virtudes. Aunque el enfoque de Gminis es
esencialmente intelectual, los Gemelos simpatizan-con la actitud emocional del Carnero, al mismo tiempo que
conservan su independencia respecto de este compromiso exagerado. Los hombres y mujeres regidos por
Mercurio comprenden los impulsos temerarios de Marte. Sin embargo, se dan cuenta de que a ellos les
conviene evitar las complicaciones emocionales, siempre que ello sea posible.
Los Gminis desconfan de las estrechas relaciones humanas que amenazan con sofocarlos, de los empleos
a largo plazo sin cambios ni estmulos... de cualquier cosa que inmovilice sus sueos o corte las alas de
Mercurio, porque temen que su propio espritu quede apresado. El signo de Aire de Gminis anhela
remontarse por encima de las llamas que arden alrededor del signo de Fuego de Aries. Al mantenerse retrado
y ligeramente apartado, Gminis se las apaa ms a menudo para conquistar el tipo de libertad que Aries
tambin desea pero no siempre consigue. Por supuesto, un exceso de libertad mental y emocional puede
generar sus propias confusiones, y cuando los Gemelos quedan atrapados en la red de sus propios vericuetos
mentales, a veces la misma desenvoltura del Carnero puede ayudar a desatar los nudos.
Afortunadamente, el Aries tpico no slo intuye la dualidad de Gminis sino que adems est dispuesto a
concederle espacio para que exista. Por ello esta asociacin es a menudo beneficiosa para el geminiano,
porque la comprensin o la incomprensinrespecto de sus sueos, influye mucho para determinar si stos
se materializan, sencillamente se herrumbran, o se convierten slo en quimeras que Gminis siempre persigue

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pero nunca alcanza. El Gminis soar desde su ms temprana infancia hasta pasado el lmite del siglo. La
mayora de las personas interpretan la curiosidad y las ansias de experimentacin de Mercurio como un
mosaico de afanes excntricos y volubles, pero el Carnero parece entender que esta mirada de intereses slo
representa el esfuerzo de Gminis por integrar la multifactica personalidad mercurial, que tanto fascina a
Aries.
Es ms difcil que a Aries le disguste que Gminis revolotee de un tema a otro, buscando todas las
respuestas, mientras descarga un torrente continuo de imaginacin y energa esttica. Interrumpir a un ave
mercurial mientras se expresa verbalmente es como tratar de capturar una lucirnaga y, curiosamente, los
Carneros (que a su vez son relativamente expertos en interrupciones) as lo entienden. Estos dos se
interrumpen continuamente, con una recproca falta de resentimiento, y ste es un detalle muy simptico de su
asociacin.
Si en sus cartas natales existe un aspecto negativo entre el Sol y la Luna o el ascendente, es posible
que Aries acuse a Gminis de fantasear demasiado y de no hacer suficientes cosas concretas, y que intente
acorralado para obligarlo a formular respuestas directas. Tal vez entonces la lengua custica de Gminis
lastimar el ego ultrasensible del Carnero, y estallar una batalla feroz en cuyo transcurso saltarn chispas en
todas direcciones a medida que la actitud insustancial de Gminis avive las llamas de la clera de Marte. Sin
embargo, los vientos cambiarn, al cabo de un tiempo, incluso despus de las escenas ms tempestuosas... y
casi nunca alguno de ellos dejar perdurar el resentimiento. Como sucede con todas las configuraciones de
vibraciones 3-11, Aries y Gminis son bsicamente buenos amigos, y casi siempre continan sindolo.
Adems, son capaces de comunicarse verbalmente sus diferencias de opinin tanto como haga falta para
despejar la atmsfera y reanudar la relacin armnica.
La mente mercurial de Gminis, aunque a veces se disfrace inteligentemente tras .una mscara de aplomo y
simpata, parece una peonza. Gira continuamente. Aries montar alegremente en ella, y probablemente
disfrutar de la vertiginosa experiencia. Mientras el Carnero no intente aprisionar el espritu libre de Gminis
con demasiadas preguntas y exigencias, los dos se entendern bastante bien. (Los cuatro, si contamos al
Carnero, los Gemelos y el ego de Marte). Aries y Gminis pueden construir, con el ter multicolor de sus
imgenes mentales combinadas, castillos de arena suficientemente altos como para llegar a las estrellas. Pero
los cimientos debern ser slidos y estables, porque de lo contrario se derrumbarn. Si construyen
slidamente desde el principio, el producto final podr ser realmente portentoso: una suma de arco iris,
mariposas y trasgos. La paciencia es la llave secreta para pasar al otro lado de la valla, donde la hierba
siempre les parece ms verde y fresca a Aries y Gminis, los jvenes eternos, que andan en busca de Shangrila, la Ciudad de Esmeralda de Oz, el Pas de las Maravillas y la Fuente de Juvencia. Juntos, tienen ms
posibilidades que la mayora de las personas de encontrar esos lugares... e incluso ms posibilidades que ellos
mismos si hubieran emprendido la bsqueda aisladamente.

Mujer ARIES Hombre GMINIS


No me olvidars... verdad, antes de que llegue la primavera? Por supuesto Peter
lo prometi; y despus se fue volando.

Hay mujeres Aries y hombres Gminis que se cogen suavemente de la mano y retozan juntos calle
abajo como nios. Hay otras mujeres Aries y hombres Gminis que entablan sarcsticas y furiosas trifulcas
verbales desde que se levantan hasta que se acuestan... y ambos tambin hablan en sueos. A menudo, la
fusin emocional de Marte y Mercurio en una experiencia amorosa produce una extraa alquimia de ternura
obsesiva, jalonada por crueles agravios, en razn de lo cual la relacin puede ser triunfal o desastrosa. Quiz
se deba a que Gminis, a diferencia de los otros dos signos de Aire, expresa verbalmente tanto su admiracin
como su desdn en trminos muy claros e inconfundibles. O quiz se deba a que Aries, a diferencia de los
otros dos signos de Fuego, se deja consumir por la pasin del momento, ya se trate del amor o el odio, y
nunca piensa que maana podra arrepentirse.

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La configuracin de signos solares 3-11 ejerce una influencia muy caracterstica sobre dos personas unidas
por sus vibraciones cordiales y muy comunicativas. Es indudable que reirn ocasionalmente, incluso
frecuentemente, pero sus reyertas ms tempestuosas contendrn la simiente de la primavera, y nuevas
promesas para el futuro. Sus malentendidos son extraordinariamente verbales, y a menudo muy sonoros, pero
quin sabe por qu, no demasiado serios. Es casi como si en medio de la batalla ambos tuvieran conciencia
del potencial que existe para la tregua.
Estos dos podran decir con acierto de s mismos...
algunos aman con sobriedad
como si ms adelante hubieran de odiarse
pero nosotros odibamos apacible, cuidadosamente como si ms
adelante hubiramos de amarnos... *
Existen pocos elementos de sobriedad en el amor entre Aries y Gminis. Cuando el Carnero y los
Gemelos se enamoran, ninguno se molesta en preguntarse si el desenlace del amoro, o del matrimonio, ser
dichosamente feliz o cruelmente triste. La atraccin inicial, el tironeo magntico de sus personalidades
despreocupadas, determina que ambos se busquen confiadamente, sin inquietarse por el final an lejano. Si
ste debiera producirse eventualmente, de cualquier manera que fuese por separacin, divorcio o muerte
las remembranzas de un amor tan ingenuo, excitante y lleno de fe ciega como el corazn de un nio en
Nochebuena, suavizar las aristas del recuerdo de cualquier pena o agravio que pudieran haberse inferido
mutuamente. ste es el encanto de la vibracin 3-11, en la cual la amistad sincera forja el cimiento de la
empata, desde el primer saludo.
Los celos pueden complicar mucho las cosas. La chica Aries tpica es todo lo celosa que puede ser una
mujer, sin ponerse ntegramente verde, y casi nunca atina a reconocerlo racionalmente. Los celos no emanan
de una naturaleza posesiva sino del tremendo miedo al rechazo que experimenta el recin nacido ariano
simblico (el rechazo implicara, para un recin nacido, la muerte literal), y de la necesidad de que le
ratifiquen constantemente cunto lo quieren. La injustificada preocupacin de Aries por la posible
transferencia del amor a otra persona es ms comprensible cuando se la estudia a la luz de estos sentimientos
inconscientes de indefensin infantil y de dependencia total respecto de un cario continuo e ininterrumpido.
Se trata de un sentimiento que est siempre presente, justo debajo de la deslumbrante bravata con que Marte
proclama su independencia y autarqua, que no son de ninguna manera reales, sino slo ficticias... una especie
de proteccin contra una mayor vulnerabilidad.
El hombre Gminis tpico no es excesivamente celoso (siempre que no tenga una influencia negativa
de Marte en su carta natal, o una Luna o ascendente Aries). Y es posible que la mayora de las dificultades
residan en esto. Porque, veris, a ella le gustara secretamente que lo fuera. Lo menos que l puede hacer es
simular que lo es. A la chica Carnero, lo comprenda o no conscientemente, casi le gusta despertar el instinto
celoso de su hombre. Los celos le confirman que l la considera importante, y esto es algo que nunca se le
puede confirmar con demasiada frecuencia a un Aries. Es posible que el hombre Gminis la deje conforme, y
acceda a su deseo, si ella se descarra de manera excesivamente obvia. Pero casi siempre estar tan ocupado
cambiando de ropa, de estado de nimo, de ideas, de sueos y de humor que no dispondr de mucho tiempo
para detenerse a observar y escuchar cualquier coqueteo inocente del que ella se valga para provocarlo con la
esperanza de caldear el enfoque fro, desapegado y etreo que tiene de la vida... y de ella.
A la inversa, l no necesitar hacer ostentacin de ningn flirteo delante de ella para generar un
relampagueante estallido de celos. Bastar con que salude por la maana con tono demasiado ntimo a la
encargada del quiosco de peridicos de la esquina. Como el hombre Gminis le tiene mucho cario a su
libertad, y aborrece los grilletes emocionales que traban sus actividades gregarias normales, no harn falta
muchas escenas de este tipo para hacerle perder la paciencia. Aunque ella deber aprender a controlar u
ocultar de alguna manera sus celos (si no quiere perderlo), l tambin deber acostumbrarse a comprender el
motivo que la induce a adoptar semejante comportamiento: el temor interior de que le falte la feminidad
suficiente para conservar la fidelidad de l (si l no quiere perderla a ella). A lo largo de los aos se ha hecho
tanta propaganda en torno de la conejita-gatita esbelta, sexualmente seductora, cabeza hueca, suave y dulce
con la que suea todo hombre, que no se puede culpar a la mujer Aries si adquiere una neurosis respecto de
su mente gil, su actitud desenvuelta frente al amor y su carencia de arteras insidias femeninas...
especialmente porque naci bajo la influencia de un signo solar masculino.
La mujer Aries tiene coraje e iniciativa, es enrgica y ambiciosa... cualidades todas stas presuntamente
masculinas. Los hombres creen monopolizar estos rasgos. No habis ledo los panfletos del movimiento de
liberacin femenina? (Es muy posible que la mujer Aries sea la dirigente del grupo que lucha por la Ley de
Igualdad de Derechos dentro de su comunidad.) Qu se supone que debe hacer una chica Carnero para que la

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consideren femenina? Leer el libro The Total Woman de Marabel No-Recuerdo-QuMs, y totalizarse con
slo quedarse sentada en casa murmurando Eres maravilloso, cario, sin hacer nada por su propia
iniciativa? De esto se trata, ms o menos, segn Marabel y todos los machistas. Simple, verdad?
Oh, supongo que podra hacer otras cosas para conservar su feminidad, como lavar la colada, planchar,
cocinar, cambiar los paales de los cros, comprarse ropas, chismorrear, planchar, lavar la colada, cocinar,
alumbrar hijos... acaso me estoy repitiendo? Lo siento, empezaba a aburrirme. En mi propia condicin de
Aries, nunca he entendido por qu a una chica han de catalogarla como agresiva slo porque sabe lo que
quiere. Si la mayora de los hombres prefieren una esposa-robot en lugar de una verdadera esposa, peor para
ellos. Las mujeres Aries, junto con sus hermanas Sagitario y Leo, a veces compiten con los cerdos
chovinistas masculinos pues tambin pueden comportarse como cerdas chovinistas femeninas bastante
revoltosas. Estos animales de sexo femenino existen de veras.
Ahora bien, por qu he escrito esto? Les he dado una nueva arma verbal a los hombres Gminis
espabilados. Le pido disculpas a Gloria Steinem, a quien admiro mucho, pero es cierto, Gloria, y t lo sabes.
Por favor no os ofendis, porque yo tambin soy as. O sea que pienso que todo lo que ellos pueden hacer,
nosotras podemos hacerlo igualmente... y algunas cosas las hacemos mejor. No es necesario suministrar la
lista de estas cosas. Todos y todas sabemos cules son. Oh, t no? Bueno, por amor de Dios... la mujer
suministra paciente y tiernamente un apacible jardn en el cual los bebs crecen durante nueve meses, puede
soportar el dolor hasta un umbral ms alto que el del hombre, posee el sentido comn y la lgica esotrica
necesarios para saber que la guerra nunca resolvi nada, y puede percibir el peligro y el mal mucho antes de
que afloren. Estos son unos pocos aspectos en los cuales somos superiores a la esencia masculina. Tambin
somos ms sensibles, intuitivas y clarividentes, ciertamente ms compasivas.... y al mismo tiempo mucho ms
realistas que los hombres. Pero no tan sentimentales. (No sabas que los hombres son secretamente
sentimentales? Tanto que tambin les han enseado a ver a las mujeres la poesa y la belleza de la vida.) Est
muy bien que las cerdas chovinistas femeninas sepan cules son las reas en que son iguales y superiores al
sexo masculino, pero tambin deben saber cules son las reas en que los hombres son iguales y superiores a
las mujeres. Esto es lo que forja la autntica feminidad y la autntica masculinidad.
Est escrito que la mujer Aries, con su fe inocente en los milagros, descubrir algn da a un hombre que
estar buscando a una mujer autntica, y este hombre podra ser un Gminis. Es posible que este hombre
tenga dos cabezas y deseos gemelos, pero tambin experimentar una fuerte necesidad de poder jugar al
ajedrez mental con la mujer que ama. No est hecha para Gminis la plcida sirena que lo contempla desde
abajo con silenciosa y palpitante pasin, porque esto es ms fcil que tratar de competir con l en ingenio,
indudable que l se enamora primero con la cabeza. Despus con el corazn, y a continuacin interviene su
deseo fsico. Cuando se trata de los Gemelos, el romance sigue generalmente este orden de prioridades. En el
caso de la mujer Aries, el orden de prioridades slo se modifica ligeramente. Ella se enamora primeramente
con el corazn, inmediatamente despus con la cabeza... y por ltimo interviene su deseo fsico. Las pautas
iniciales se modifican, pero esto no es tan importante como el hecho de que ambos terminan sintonizados en
la misma frecuencia cuando ello corresponde... en ltimo lugar, despus de haber verificado su afinidad
mental y emocional. sta es una frmula que tiene un xito asombroso.
Como l sabr apreciar el desafo intelectual permanente de la chica Aries (Aries rige la cabeza, Gminis
la mente, entre otras cosas), finalmente ella aprender a confiar en el hecho de que l la ama por lo que es.
Entonces es posible que le revele lo que no le ha permitido descubrir a ningn otro hombre: que ella puede ser
autnticamente dulce y tierna en un hombre que demuestra ser superior en algunos aspectos, y que al mismo
tiempo le manifiesta claramente que tambin la admira por sus cualidades, que son idnticas a las de l, y a
veces son igualmente superiores. He aqu una difcil prueba de malabarismo, pero si alguien puede ejecutarla,
se ha de ser un Gminis. Su encanto natural y su volubilidad (algunas personas la llaman charlatanera)
bastan para mantener apaciguados la vanidad y el ego de Marte, y ciertamente est en condiciones de manejar
cualquier tipo de controversia verbal que ella se empee en entablar. Y es posible que entable bastantes.
Quizs a ella le resulte difcil acostumbrarse al tpico hbito Gminis de la impuntualidad. Ella misma es a
menudo un poco negligente en este contexto, pero los Carneros tienen una forma bastante egosta de
indignarse cuando les pagan con su misma moneda.
En una oportunidad un hombre Gminis lleg con tres horas de retraso a una cita que tena conmigo. Prev
sus excusas (una de las ventajas de ser astrlogo) y escrib unos versos sobre su persona mientras lo esperaba.
Siento haberte hecho esperar
escucha, no llores... fueron slo una hora o dos no encontraste en

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qu ocupar tu tiempo?
Yo lo habra encontrado, en tu lugar. *
Cuando por fin lleg, los ley y exclam: Caray! Cmo adivinaste exactamente lo que iba a decir? La
chica Aries que est enamorada de este prodigio bicfalo y gemelo de deseos y acciones duales deber
estudiar minuciosamente la diferencia entre la palabra gregario y la palabra infiel, y notar que existe una
diferencia. Tambin deber estudiar el significado de las palabras libertad y amor y comprender que,
para un Gminis, son sinnimos. Esto la ayudar a reducir el nmero de discusiones.
En cuanto a la compatibilidad fsica, el Gminis es uno de los pocos hombres capaces de crear el
clima de ilusin que esta mujer debe asociar con el sexo. Ella idealiza la expresin sexual del amor y la
convierte en una trama multicolor, estratificada, urdida con todos los libros que ha ledo, todas las pelculas
que la han hecho llorar y todas las esperanzas rutilantes que ha alimentado en el fondo de su corazn. Est
convencida de que las campanas debern repicar literalmente cuando los dos se fusionen. En compaa de l,
es posible que las escuche realmente, porque la imaginacin del Gminis puede suministrar todas las fantasas
que ella necesita para realizar sus sueos romnticos de Cenicienta.
Este tipo de empata es la que los induce a enamorarse inicialmente, a veces a primera vista (ninguno
de estos dos signos solares se destaca por su parsimonia). Pero posiblemente ms adelante las fantasas no
bastarn para mantener viva la llama del amor de ella, cuando el desapego geminiano no satisfaga su concepto
total de la expresin sexual, que no es puramente imaginaria. Ella tambin necesita lo tangible. Tal vez
empiece a pensar que l siempre retiene una pequea parte de su persona, incluso en los trances de intimidad,
y es posible que tenga razn. Ella no oculta nada, empujada por el instinto ariano de entrega total. La
proclividad marciana a la accin directa casi nunca se diluye en la entrega de la pasin... o en el intercambio
de sta. Es posible que con su forma etrea de hacer el amor l no consiga estimular en ella estos impulsos
fsicos naturales (para los Carneros). Tal vez entonces ella intuya que los cuentos de hadas carecen de
sustancia, cuando no hay fuego para inflamarlos, y quiz se aburra... o, lo que es mucho peor, se torne frgida.
sta es un rea de ajuste delicada, y la relacin tendr ms probabilidades de xito si la Luna y/o el
ascendente de la carta natal de l est en un signo de Fuego. De lo contrario, es posible que l no pueda
ensearle lo que ella est en excelentes condiciones de aprender, despus de que Gminis haya vencido las
inhibiciones iniciales de Aries con sus preliminares idealistas. El Prncipe Gminis puede despertar a la
Princesa Aries con un beso, pero en ausencia de la pasin total ella puede volver a dormirse, sin saber nunca
el verdadero motivo. Entonces el Fuego de Aries puede trocarse en el Hielo de Aries, lo cual es un triste
derroche, cuando se piensa en el calor que ella puede irradiar tan generosamente cuando se estimula el
desarrollo del potencial completo de su naturaleza fogosa.
Es posible que durante una de sus partidas mentales de ajedrez, cuando l se comporta de una manera
intolerable, ella intente argir: Comprendo que t crees haber entendido lo que acabo de decir, pero no estoy
segura de que hayas captado lo que no me propuse insinuar, por temor a que t interpretaras equivocadamente
lo que yo crea que pensabas. Si esto lo deja perplejo, ella puede agregar: Estupendo. Ahora sabes lo que se
siente al hablar contigo... o ms exactamente, con vosotros. Con vosotros dos.
Ella tambin podr dejar este libro al alcance de l, abierto en este captulo, para recordarle cun aburrida
sera su vida si ella no se hubiera cruzado en el camino de su corazn. Pero deber reprimir el impulso de
entregarle el libro directamente, y de ordenarle que lo lea inmediatamente. Cenicienta jams obrara as.

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Hombre ARIES Mujer GMINIS


l volvi, y ahora haba en sus ojos una expresin vida que debera haberla alarmado,
pero no la alarm.
Si no se conocieron en la escuela secundaria y se casaron poco despus (cosa que sucede con bastante
frecuencia entre estos dos signos solares, porque los dos llevan siempre mucha prisa), es posible que el
hombre Aries le guarde un rencor feroz a la vida amorosa pasada de su chica Gminis, que segn las pautas
normales puede haber sido bastante movida. Casi seguramente incluir, si no un par de ex maridos, por lo
menos media docena de compromisos anulados o algunos antiguos romances titilantes. Todos los Gminis
deben precaverse de los matrimonios prematuros, a menos que hayan nacido cuando su Luna o ascendente
estaba en Capricornio, Virgo, Cncer o Tauro.
No se trata de que ella sea inconstante o promiscua, sino de que suele pasar revista a la larga nmina de
centrocampistas mientras corre por el campo de juego, hasta encontrar uno capaz de atajar todos los goles. S,
ya s que los centrocampistas no atajan, y que los porteros no patean el baln en el centro del campo... pero
ningn hombre que no sepa hacer por lo menos las dos cosas con igual pericia, y preferentemente otras ms, y
tambin preferentemente las dos al mismo tiempo, tendr muchas probabilidades de xito con ella.
Por supuesto, sabemos que esto jams le ocurrira a un hombre Aries, porque puede hacerlo todo en
general o por separado mejor que cualquier otro, en cualquier momento, as que supongo que sta es slo una
discusin acadmica, pero de todos modos no estar de ms que lo recuerde.
Durante toda su vida esta mujer ha pensado que la casa que tena ventanas doradas era la de la cumbre de la
colina. Trepa hasta all y, cuando est en la cspide, mira hacia abajo y descubre que la casa que tiene
ventanas doradas es, despus de todo, la que se levanta al pie del cerro. De modo que vuelve a bajar y
redescubre que la casa de la base slo tiene ventanas comunes, como ella haba pensado al principio, y
entonces levanta la mirada y ve brillar una vez ms las ventanas doradas en la cima. Resuelve que se haba
equivocado y vuelve a trepar penosamente para sufrir otro desengao. Por qu esas ventanas doradas son tan
esquivas? Tantos ascensos, descensos y nuevos ascensos pueden resultar espiritualmente agotadores, hasta
que descubre que el reflejo del Sol es slo una ilusin en absoluto real, algo relativo que depende de la
hora del da y del lugar donde uno se encuentra en cualquier momento dado.
Quizs hay trances en que una chica Gminis piensa que un viejo amor fue el que realmente tena
posibilidades doradas, pero antes de comprobar que sta, tambin, es una ilusin, habr perdido al hombre
Aries, ya sea que lo haya dejado solo en la cima o al pie del cerro. El Carnero nunca comprender la nostalgia
de su mujer por los romances de antao, aunque l mismo rinda homenaje a un viejo amor todos los aos, en
el da de la marmota. Recordad el egocentrismo ariano. l puede hacerlo. Ella, no. Por qu? Porque l sabe
que su nostalgia es inocente y nunca llevar a ninguna parte. No est tan seguro acerca de la de ella. (La
inseguridad encubierta de Aries.)
Es posible que, junto con sus innegables deleites, esta relacin tenga otros pocos peligros latentes,
como una posible falta de fuerza de voluntad y de estabilidad. Los Carneros tienen sencillamente la mar de
mpetu y energa, pero la perseverancia en los trabajos que inician no se cuenta entre sus virtudes. Como el
hombre depende inconscientemente de la mujer para que sta supla sus carencias, es posible que al buscar
apoyo en una chica Gminis est confiando en una pluma al viento. La fuerza de voluntad y la fiabilidad
tampoco son las mayores virtudes de ella (a menos que su Luna o ascendente, como acabo de decir, est por
casualidad en Cncer, o en un signo de Tierra... y naturalmente, lo mismo vale para l). Por consiguiente,
estos dos (podramos decir estos tres o cuatro) pueden disparar un montn de fuegos de artificio que siguen
deshacindose en chispas mientras cada uno de ellos alienta las debilidades del otro: la pereza y el hasto
rpido.
Este es un hombre que probablemente no insistir para que su mujer Gminis barra la chimenea, con un
delantal de zaraza, ni para que riegue la huerta. Probablemente comprender que puede aprovechar las
opiniones verstiles de ella en su vida empresarial o profesional, as que es comn encontrar a esta pareja
trabajando junta, tanto despus del matrimonio como antes. Generalmente los dos forman un equipo de
primera. l sabe con exactitud lo que ambiciona... y ella tiene muchas ideas para ayudarlo a alcanzar su meta.
Adems, l puede vigilarla mejor si la tiene todo el da cerca. As no debe preocuparse por el lechero, el
limpiador, el carnicero y ese to tan apuesto que maneja el ascensor en la casa de apartamentos donde viven.

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Su propensin mercurial al fuego de flirteo inofensivo (casi siempre) echa abundante lea al fuego de los
celos arianos, y todo lo que pueda contribuir a mantener bajo control estas chispas marcianas es deseable.
Sera interesante, desde el punto de vista astrolgico, una encuesta encaminada a determinar cuntos arianos
sugieren eventualmente que sus esposas colaboren con ellos como secretarias o como socias cabales. Por otra
parte, estos amantes se conocen a menudo en el trabajo. Las mismas ocupaciones y carreras les interesan a
ambos, as que es totalmente natural que tropiecen el uno con el otro en un rea o profesin creativa que los
excita y estimula.
Nunca veris a un hombre Aries y una mujer Gminis que, aunque haga mucho que estn casados, lean el
peridico en la mesa del restaurante, o miren a los otros comensales, en silencio, sin fijarse el uno en el otro,
cosa que desgraciadamente hacen tantas parejas cuando se aplacan un poco los primeros mpetus del romance.
Aries y Gminis siempre tendrn algo que decirse... y a veces demasiado. Sea como fuere, no es fcil que la
conversacin entre ellos decaiga. La mayora de las veces su comunicacin verbal est compuesta de
intercambios estimulantes y chispeantes, pero cuando ella toca un nervio vivo de su sensible ego marciano
con ese talento que tiene para dar en el blanco del sarcasmo, puede desencadenarse una batalla retrica que tal
vez dejar heridas muy profundas. Sin embargo, afortunadamente, estos dos suelen perdonar y olvidar los
agravios con la misma rapidez con que los infligen.
Cosa curiosa, a veces esta relacin amorosa es ms insoportable para los dems que para el hombre y
la mujer mismos. Cuanto ms sincera y profundamente se aman, tanto ms posible es que sus amigos, vecinos
o parientes deban sufrir, en algn momento u otro, aunque slo sea espordicamente, las consecuencias de
este romance en que el Aire aviva el Fuego. De cuando en cuando, la mujer Gminis imaginar toda clase de
cosas, sencillamente falsas, acerca de la gente que la rodea. Se convencer a s misma de que mantuvo un
dilogo determinado con otra persona, y se lo transmitir a su amante o marido Aries, en trminos totalmente
desvinculados de la realidad o de los que en verdad fueron pronunciados. (Sucede sencillamente que su vivaz
imaginacin mercuriana la induce a llenar los huecos aburridos o poco interesantes con una retrica ms creativa.)
Dado que l la ama con la vehemencia con que slo un Carnero puede amar, es posible que se sienta
tremendamente ofendido por estos agravios ligeramente exagerados de los que fue objeto su bella dama, y que
encauce su clera marciana, elevada a la ensima potencia, contra la persona atnita que, segn le han hecho
creer falsamente, la trat con tanta descortesa. (Los hombres Aries son ferozmente leales a sus amigos y
parientes, y sobre todo a sus consortes.)
Ms tarde, el Gemelo veraz de la mujer le turbar la conciencia al recordarle apacible pero insistentemente
que el episodio no se desarroll en los trminos espectaculares con que ella se lo ha descrito al Carnero. Si
ella se sincera, l deber controlar sus arranques de ira marciana y deber valorar con ternura los esfuerzos de
Gminis por separar la realidad de la imaginacin. Porque la mujer Gminis est hecha de un material frgil.
No es el implacable guerrero Marte quien la protege, como lo protege a l, durante su viaje por la vida, sino
slo el imprevisible mago Mercurio, quien a menudo se oculta de ella precisamente cuando toda mujer ms
necesita la sabidura del planeta que la rige.
El corazn de la mujer Gminis contiene muchos acordes distintos de msica obsesiva. Ella es una sinfona de
recuerdos, compuestos de belleza y luz, de fealdad y sombra, en razn de lo cual el Aries ms franco que la
ama se pregunta a veces: Quin es esta mujer... esta desconocida ntima y familiar? Quin es... y qu es?.
Quin es...? Es aquel de los dos Gemelos que lleva la batuta, en un momento dado. Qu es? Es el ramo
de calndulas colocado en un florero de color azul cielo, sobre el escritorio de su maestra, en tercer grado... es
la cabalgata del circo que presenci una vez, cuando el payaso le arroj una rosquilla que ella atrap
jubilosamente... es una evocacin de paseos nocturnos en carromatos y de huracanes... es su primer par de
zapatos negros de charol... es una tormenta de esto en el bosque, en el campamento de nias exploradoras,
que les hizo exhalar a los pinos un aroma de jacintos... es un campo de brezos purpreos donde ella pas
horas sentada, y que la transport a Escocia donde se transform en la Dama del Lago... y tambin en la
solitaria Evangeline... es el pajarillo extraviado que ella aliment cuando tena cinco aos, hasta que reuni
fuerzas suficientes para volar. stas son las cosas que ella es. Todas ellas.
Por tanto, aunque la nia-mujer Gminis debe ejercer una cierta dosis de control sobre su imaginacin, si
pretende armonizar con el Carnero recto y veraz que ama, tambin debe cuidarse de no reprimirla por
completo, porque es la cualidad que Ja convierte en un ser tan exquisitamente femenino para l. Los nios
tambin poseen una imaginacin vivaz, y l, este hombre, la ve, ms a menudo de lo que ella piensa, como
una niita que necesita esta imagen de su indefensin derrotndolo en sus juegos de ingenio mentales.
Algunas Gminis pueden comportarse, cuando lo desean, como autnticas fieras intelectuales, con una lengua

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afilada como un cuchillo y un cacumen nada menos que brillante... lo cual no acta como un blsamo sedante
sobre el amor propio masculino del Carnero macho. Pero entonces, tambin est el ramo de calndulas en el
florero de color azul cielo...
En cuanto a l, no est hecho slo de las speras tnicas del coraje descarnado, ceidas por el cordel
escarlata de la bravuconera. Sus cuernos de Carnero se enroscan alrededor de los recuerdos de sus das de
Lancelote... de la primera vez que nad con la cabeza bajo el agua porque no saba nadar, pero nad... de su
peonza rota... de sus sueos quebrantados... y de las pesadillas sin contorno ni forma, provenientes de un
temor infantil sepultado, ya olvidado... de la Navidad en que Santa Claus olvid el cachorrillo que figuraba en
su lista... de los fuegos de artificio que l encendi, cuando tena nueve aos, en el Da de la Independencia...
de la primera vez que vio un caballo y aspir los olores embriagantes de un granero... de la sensacin que
experiment cuando supo por primera vez cun sacrosanta poda ser una noche silenciosa, al dormir solo bajo
incontables estrellas refulgentes que entonaban para l una meloda aorada que nadie ms poda or.
Son tantas cosas, este hombre... esta mujer. Sobre todo, son los habitantes ocasionales de una comarca, de un
reino que descubrieron por s solos, donde todo era bello... pero solitario... y donde hacan falta otros ojos para
ver el entorno, pues slo as se lo poda considerar autntico. Es posible que el uno visite los mundos privados
del otro, pero si la invitacin recproca que formulan con tanta ansiedad... tcitamente... es rechazada, puede
ocurrir que cada uno se repliegue en su reino, cada vez con ms frecuencia, y que deje al otro penosamente
atrs. Estos amantes no deben permitir nunca que se produzca semejante repliegue, porque las estrellas y los
planetas han forjado sus mundos quimricos con tantas semejanzas, que seguramente se sentirn mucho ms
felices cuando atraviesen danzando sus sueos recprocos, que cuando uno de ellos se detenga, compungido,
frente al cartel del otro donde se lee Prohibido pasar.
Desde el punto de vista sexual, este hombre y esta mujer sentirn, al principio, que forman la pareja ideal. El
Carnero suea con llegar al jardn del amor en una alfombra voladora de aventura, directamente extrada de
las Mil y Una Noches (o de la Era de la Caballera), y la mujer Gminis desempear a la perfeccin el papel
que le corresponde en ese drama onrico. Ella no slo le seguir el juego, sino que idear una cantidad
suficiente de nuevas variantes como para mantenerlo fascinado hasta mucho despus de la luna de miel. Nadie
como una mujer Gminis para convertir un lecho normal en el harn de un sultn, y esto deja muy satisfecho
al hombre Aries, que desea que su consorte sea el paradigma de la mujer. Mientras viva con ella, nunca sabr
quin lo espera por la noche en la intimidad del tocador. Tal vez sea Cleopatra, George Sand, Mata Hari,
Rebecca de la Granja Sunnybrook, Lady Hamilton o Fanny Brice. Durante un tiempo esto lo excitar, hasta
que empiece a buscar a la mujer sensual en el armario y debajo de las almohadas.
La expresin sexual del ariano es directa e intensa. La de ella es un poco ms evasiva y compleja. Es
cierto que a l le gusta encaminarse hacia el acto amoroso por un sendero de romance imaginativo, pero al
llegar a destino pretende saciar su sed en un torrente de pasin pura y sincera. La actitud de ella hacia el amor
fsico irradia a menudo un aire de intangibilidad, hasta el punto de que el Aries puede acusarla de estar en otra
parte durante sus momentos ntimos, y la Gminis puede sentirse fastidiada por la intromisin masculina en lo
que, para ella, siempre es un lugar sagrado: su mente.
Este hombre necesita que su unin sexual se asocie con ensueos, pero hay una hora y un lugar para
stos, y ni la una ni el otro coinciden, a juicio de l, con el ltimo acto del drama amoroso. El Aries opina,
como George M. Cohan, que todo acto final debe incluir una versin emocionante de The Star and Stripes
Forever (si pretende un bis). Ella entender mejor la cadencia romntica de l si escucha la versin orquestal
completa, en cassette o estreo, de Los planetas de Holst, grabada por el Carnero Andr Previn. El pasaje
titulado Marte le transmitir el mensaje a fondo, incluyendo el violento nfasis de la percusin final, que
simboliza con asombrosa lucidez los ritmos del planeta que los rige. Es un curso de educacin sexual ariana...
y el aprendizaje es ms bello, como todo, en el mundo, con fondo musical.
Es posible que l intuya a veces que ella busca algo que nunca ha existido, y que no se d cuenta de que si l
pusiera un poco ms de ternura de su parte, tal vez ella podra transmutar sus vvidas imgenes en realidades
igualmente hermosas. Las imgenes de Gminis proyectan un retrato autntico de lo que podra ser... si se les
permitiera tomar cuerpo y forma, cariosamente. Es la doble conciencia de ella la que puede deformar la
comunicacin. Pero el amor puede mantener los circuitos mercuriales libres de vibraciones negativas. El amor
lo puede todo... literalmente, todo.
Este hombre y esta mujer eternamente jvenes podran escuchar juntos la misma meloda, y seguir al
mismo tamborilero lejano, durante muchos aos felices... siempre que ella entienda que los celos y las cleras

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petulantes de l provienen de sus vulnerabilidades emocionales arianas... y siempre que l respete el amor de
ella por su propia personalidad gemela. Es posible que este amo la transporte a veces a lugares hacia los que
correr a un paso que l no podr seguir, pero volver, renovada, y lista para marchar con l hacia nuevos
horizontes.
l es muy inteligente y valeroso, muy cordial, franco y entusiasta. Ella es cabalmente femenina,
encantadora, verstil y espontnea. Mientras no intenten cambiarse el uno al otro, seguirn siendo
eternamente nios. Y los nios... son los seres ms afortunados del Universo.

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TAURO

GMINIS

Tierra - Fijo Negativo


Regido por Venus (tambin por el
planeta Pan-Horus)
Smbolo: el Toro
Fuerzas nocturnas Femenino

Aire - Mutable - Positivo

Regido por Mercurio


Smbolo: los Gemelos
Fuerzas diurnas Masculino
-

La relacin TAURO-GMINIS
Sin pensar ni un momento en lo que poda sentir un semejante privado tan bruscamente de su
compaero ms ntimo, Peter se pregunt inmediatamente cmo podra sacar provecho de la
catstrofe...
Los hombres y mujeres Tauro son individuos callados, estables, prcticos, que procuran ocuparse de sus
propios asuntos. De cuando en cuando pueden ser feroces, pero durante la mayor parte del tiempo conservan
una calma admirable. Un Toro puede mirar de frente el ojo de un huracn, si es necesario, sin conmoverse ni
pestaear. Sin embargo, su fuerza maravillosa y tenaz obstinacin apenas pueden competir con la
deslumbrante agilidad de una pareja de Gemelos, capaces de revolverse y esquivar inteligentemente cualquier
amenaza terrenal... Los Gemelos son, por supuesto, dos personas distintas disfrazadas de una sola, que se
autodenominan Gminis.
Compadeced a los pobres Toros que se enfrentan con estas dos personas veloces, de pies giles, de mente
aguzada, que zigzaguean y los confunden, hacindoles creer todo el tiempo que enfrentan a un solo torero. Es
difcil entender cmo alguien puede divertirse atormentando cruelmente a una colosal y noble bestia cuyo
nico deseo consiste en que la dejen sola, en paz. Uno casi desea que el Toro d en el blanco, con una sbita y
furiosa embestida de sus cuernos. A veces, esto es lo que sucede. Y sta es una advertencia justa para el
Gminis descarriado, que no sospecha cun desagradable es sentirse inesperadamente acometido desde atrs,
cuando ests sonriendo y haciendo reverencias y pavonendote gallardamente... sin mirar a tus espaldas.
Tengo un vecino Tauro, cuya hija, tambin Tauro, se enamor de un seductor Gminis. Cuando transcurrieron
seis meses sin que ella lo hubiera trado a casa para presentarlo a la familia, al Tauro se le despert la
curiosidad y finalmente empez a preocuparse. Qu significa este misterio? Te avergenzas de l? Acaso
este tipo tiene dos cabezas o algo as?. (Esto ltimo lo pregunt sin imaginar que estaba muy cerca de la
verdad.) Una tarde, se encontr con su hija y el amigo Gminis de sta en la calle, y los tres (los cuatro?) se
fueron a comer juntos y pudieron conocerse. El Toro descubri, regocijado, que su futuro yerno era un
hombre espabilado, apuesto, corts y verstil. (i Vaya si era verstil!). Hablaba seis idiomas, pilotaba su
propio avin, se haba graduado en dos universidades y tocaba el saxofn.
Mientras coma el souffl de queso, el Gminis habl brillantemente de su carrera (era asesor de
relaciones pblicas), de sus ideas polticas y de sus creencias religiosas. Cuando el hipnotizado padre Tauro
admir la enorme sortija de diamante que refulga en una de las manos expresivas y artsticas del Gminis,
ste le inform: Es un legado de familia que perteneci a mi bisabuelo, y est asegurado en siete mil
dlares. Sin duda ese hombre disfrutaba de una estabilidad econmica que lo colocaba a la altura de su hija.
Por fin, el Gminis coment que deba correr a entrevistarse con su agente de Bolsa, hizo un ademn de
despedida, sonriendo, y desapareci. Olvid pagar la cuenta, pero se haba sido obviamente un descuido. Al
fin y al cabo tena muchas preocupaciones: sus clientes, sus inversiones en Wall Street... y su romance.
A la semana siguiente, un capricho del destino quiso que el Tauro se hiciera cortar el cabello por un

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peluquero que result ser cuado del Gminis, y as se descubri la verdad. El Gminis no era asesor de
relaciones pblicas, sino asistente de un veterinario. Tena dos esposas y cinco hijos que haba omitido
mencionar. Sus ttulos acadmicos consistan en un diploma de equivalencias del bachillerato. El avin era
un modelo monomotor que haca volar en el parque los domingos. Y el diamante era uno de esos circones
falsos que venda por correo, para redondear la tarifa de sus lecciones de saxofn, instrumento que
casualmente tocaba bastante bien. Yo lo definira como un joven Hymie Shertzer, pero con un sentido
realmente pop del jazz, si es que me entiende, musit el cuado barbero. Linda msica para los odos, s
seor.
Cmo reaccion el padre Tauro frente a esta grosera traicin, que afectaba a su hija adorada y a su propia
perspicacia para juzgar a los dems? Con la furia ciega y la clera violenta de un Toro al que le han mostrado
el trapo rojo ms veces de las tolerables. Afortunadamente, cuando lleg al apartamento del Gminis, los
Gemelos acababan de partir rumbo a Mxico, para incorporarse a un conjunto de rock que iba a hacer una
gira por Sudamrica. Sin embargo, el Gminis volvi dos aos ms tarde, experiment la necesidad
sentimental de visitar la escena del crimen romntico, y le hizo una visita a su antigua amiga Tauro. Al
principio sta se neg tenazmente a aceptar sus disculpas, pero al cabo de media hora lo haba perdonado (el
encanto de Gminis) y se haba derretido en sus brazos. Otro capricho del destino quiso que en ese preciso
instante el Toro padre entrara por la puerta. (Quiero decir que en verdad casi entr a travs de la puerta.) Os
ahorrar los detalles macabros. Ms tarde, cuando les quitaron las puntadas, los Gemelos partieron
nuevamente a Mxico, esta vez para radicarse definitivamente all. Fue una medida sensata.
El hombre, la mujer o el nio Tauro tarda mucho en aprender, pero nunca olvida la
leccin aprendida. Nunca. El elefante es un animal olvidadizo, cuando se compara su
memoria con la del Tauro al que lo han herido una vez. Naturalmente, no todos los (o las) Gminis mantienen
a sus personalidades gemelas tan separadas como el saxofonista viajero. La mayora de ellos (o ellas) se las
ingenian para fusionar sus dos personalidades distintas en un ser humano espabilado, inteligente interesante,
razonablemente honesto y reconfortantemente adaptable. De todos modos, la capacidad de Gminis para
saltar de un punto de vista a otro, cuando ello le parece necesario para su supervivencia, puede producirle al
Tauro la sensacin desagradable de que sucede algo que l (o ella) no puede captar muy bien... o en lo que no
puede confiar.
sta es una configuracin de signos solares 2-12, lo cual significa que Tauro es el signo situado
inmediatamente por detrs de Gminis en la rueda krmica. En consecuencia, Gminis guarda en el alma el
recuerdo de las oportunidades que se pueden perder, por un exceso de cautela taurina. Por ello los Gminis de
ambos sexos, y de todas las edades, se cuidan mucho de evitar las rutinas mentales, o cualquier otro tipo de
estancamiento, en esta encarnacin. Sin embargo, los Gemelos comprenden la renuencia de Tauro a cambiar
la seguridad por lo desconocido, y lo comprenden mejor que la mayora de los otros signos solares porque, en
un sentido inconsciente, ellos han pasado por esa experiencia.
En cuanto a los Toros, como Gminis sigue a Tauro en el crculo astrolgico, todos los hombres y mujeres
Tauro intuyen vagamente que tienen algo que aprender de estos individuos espabilados y listos. Pero a Tauro
le resulta difcil entender aquello que Gminis quiere ensear. A los Toros les gustara poder tomar la vida
con ms informalidad, pensar expeditivamente, desprenderse del pasado sin remordimientos y emprender alegremente una nueva aventura cada da. l o ella anhela ansiosamente la libertad espiritual, chispeante y
tentadora, que Gminis, situado unos pasos ms adelante, agita constantemente en las narices del Tauro ms
lerdo. Pero... y si alguien irrumpiera en la casa y robara los bienes preciosos del Toro mientras l (o ella) est
fuera, cazando lucirnagas con los Gemelos? Y si por casualidad tropezara, y se rompiera el dedo gordo del
pie, mientras practica aerobismo a la par de los Gemelos? Y si el aire nocturno le produjera anginas al
Tauro? Quin estar esperndolo en casa para atenderlo y cuidarlo?
Siempre es ms fcil venderle un seguro de vida o de salud a un Tauro que a un Gminis. Una situacin
astrolgica tpica es aquella en que un vendedor o vendedora Gminis, que trabaja para la agencia de seguros
de un Escorpin, engatusa a un cliente Tauro y le hace firmar una pila de plizas y ttulos diversos.
Generalmente los Toros andan con tiento para no dejarse embaucar por los camelos de Mercurio, excepto
cuando se trata de comprar seguridad y proteccin invulnerables para sus familias y sus bienes, y ms an
para sus ingresos futuros. Entonces, los Toros se convierten en dciles instrumentos en manos del Gminis
astuto y seductor.
A menudo el Gminis ms liberal y razonable interpretar como un terco prejuicio el empecinamiento
dogmtico del Toro en atenerse a los hechos probados y verificados. A la inversa, el Toro tpico piensa que
siempre es posible que un aserto aparentemente correcto de la brillante lgica geminiana encubra una falacia

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o un enga detrs de la volubilidad exterior. Lo que inspira a los Tauros su desconfianza inicial frente a los
Gminis es la asombrosa locuacidad de los Gemelos. Cualquier individuo capaz de ejecutar semejantes
malabarismos con las palabras, y de urdir con ellas relatos tan hipnticos y llenos de ingenio y emocin,
despierta las sospechas de los Toros ms lacnicos, que tienden a medir cada palabra de sus raros discursos.
El hombre o la mujer Gminis casi siempre es excepcionalmente elocuente, aparentemente lgico y claro, en
sus exhibiciones verbales. Slo un Libra puede competir con los poderes de persuasin del Gminis. Pero a
Tauro no lo persuaden con tanta rapidez.
No todos los Gminis emplean mtodos dialcticos absolutamente honestos. Algunos de ellos se evaden
del tema, caen en circunloquios, e incitan al Tauro a gritar, colricamente: Quieres ir al grano? Basta de
racionalizar!. Gminis tambin tiende a utilizar formas de expresin difusas y repetitivas, en razn de lo cual
a veces sus amigos, parientes, socios, amantes o consortes Tauro adoptan el hbito fijo de desconectarse,
sencillamente, despus de la tercera o cuarta reiteracin.
La astrloga Evangeline Adams (nieta de John Quincy Adams, bisnieta de John Adams, ambos presidentes de
los Estados Unidos), destac en una oportunidad la tpica destreza verbal de Gminis, y puso como ejemplo la
Epstola de San Pablo a los Romanos, del Nuevo Testamento. Los versculos 25 a 29, del segundo captulo, y
los versculos 1 a 11, del tercer captulo, son una obra maestra de locuacidad y simpata geminianas, en cuya
confeccin intervino la ambigedad de Mercurio. San Pablo, que seguramente era un Gminis, estaba
obligado a decir a los gentiles romanos que la circuncisin no era un requisito imprescindible para la
salvacin. Al mismo tiempo, tena un compromiso con los judos, a los que les haba dicho anteriormente que
s lo era. Sus esfuerzos por resolver con xito esta contradiccin son realmente un ejemplo clsico de lo que
puede lograr la mente geminiana en sus momentos ms agudos y felices, al confundir sagazmente a cada una
de las partes mientras corteja irresistiblemente la aprobacin de ambas. Es fcil entender por qu los Gminis
sobresalen en poltica. Saben fusionar opiniones antagnicas y colgarlas de un hilo de veracidad, edulcoradas
con simpata y lgica, hasta crear un aura de paz e idealismo por todas partes. No en vano a Gminis lo
llaman el comunicador. El presidente John F. Kennedy fue un Gminis muy tpico, en todo sentido.
El desapego vivaz de Gminis puede ofender y ofuscar a Tauro, por turno, porque los Toros
interpretan el desapego como un testimonio de que los ignoran groseramente o de que los tratan con arrogante
condescendencia, y ninguna de las dos alternativas les resulta particularmente placentera. Algunos Toros
llevan durante muchos aos las cicatrices del rechazo real o imaginario de un signo de Aire. Esto es lo que
genera a menudo esos accesos de terco empecinamiento. Los Gminis no consiguen entender, aunque en ello
les vaya la vida, cmo alguien puede incurrir en la porfa de hacer odos sordos a toda lgica y razn. Sin
embargo, una o dos palabras afectuosas, un brazo pasado por encima del hombro, o un clido y cordial
apretn de manos (cualquier forma de contacto), derretir el tierno corazn de Tauro, regido por Venus, como
si fuera mantequilla colocada al Sol. A pesar de ser muy sagaces, frecuentemente los Gminis no atinan a
comprender esta frmula mgica para ablandar la fija y firme posicin mental o emocional de Tauro. La
frialdad que proyecta ocasionalmente el signo mental de los Gemelos no har ms que congelar al Toro,
transformndolo en un bloque ms slido de tierra obstinada. (El suelo congelado es ms difcil de excavar,
como sabis, que la tierra blanda y fecunda, despertada por el beso del Sol estival.)
Los Gminis siempre buscan atajos. Muy bien, Gemelos, aqu tenis un atajo para vuestra compatibilidad con
los Toros. La causa ms comn de tensin entre vosotros es el hbito taurino de sentir, cuando lo que l (o
ella) debera hacer es pensar... y vuestro propio hbito de pensar, cuando lo que deberais hacer es sentir. No
tratis de encandilar a los Toros con vuestro brillo... desconcertadlos con fuertes abrazos.

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Mujer TAURO Hombre GMINIS


A Wendy tambin le doli descubrir que el ao pasado no era ms que un ayer para Peter; a
ella le haba parecido un ao de espera muy largo. Pero l estaba exactamente tan fascinante
como siempre...
Mientras la mujer Tauro est sentada bajo el rosal, bordando cuidadosamente una tela con las palabras
Hogar, dulce Hogar, el hombre Gminis hace tamborilear sus dedos inquietos sobre el alfizar de la
ventana, y tararea su propia variacin de la meloda y la letra de la Cancin del camino abierto. Cualquiera
que sea el punto de la carretera de la vida donde se han encontrado estos dos (estos tres, si contamos a la
invisible personalidad gemela de l), finalmente llegarn a una bifurcacin que los obligar a arrojar una
moneda al aire para resolver cul de los dos ramales habrn de seguir: el que conduce a un matrimonio
cmodo y convencional, o el que conduce a una relacin informal, sin compromisos del corazn.
Corrijo: l arrojar la moneda. Ella consultar a su sentido comn, para verificar si ha equivocado el
rumbo.
Una vez que la chica Tauro est absolutamente segura de que ama a un hombre Gminis, empezar
por hacer todo lo que est al alcance de su considerable poder para engatusarlo e inducirlo a concertar un
contrato definitivo, con ratificacin social y legal. Y esta chica posee ms armas para la seduccin que las que
vosotros podis imaginar: sensualidad ertica, afecto tierno, humor fecundo, unos fantsticos bizcochos
horneados en casa, paciencia y fortaleza. Si ninguno de estos poderosos recursos femeninos diera resultado,
suspirar suavemente, inhalar profundamente, y asumir plcidamente el papel de amante, sin dejar de
utilizar en secreto esas mismas armas, pero resignada a esperar hasta que l vea la luz. Su filosofa es: Con
paciencia se gana el cielo. La mujer Tauro suele proceder inicialmente con cautela para no enredarse en las
matas venenosas del romanticismo. Es posible que tarde en dejarse echar una zancadilla por la luz de la luna y
las rosas, y por las promesas frgiles, al principio. Sin embargo, cuando esta dama ha cado, cada est, y se
necesita una gra de acero, o un camin Mack, para levantarla. A veces su sentido comn, equipado con
traccin en las cuatro ruedas, viene a rescatarla. A veces no.
Los Gminis son tan cautos como los Tauro para no dejarse atrapar al comienzo, pero incluso despus de
capitular al amor, el Pjaro de Mercurio conserva un pie ligero en la alcoba y el otro posado en el umbral de
entrada para levantar vuelo inmediatamente, si hace falta. l le entregar tiernamente uno de sus corazones
gemelos para que lo haga suyo y lo retenga, pero conservar el otro para el caso de que el que cedi se
ensucie o se rompa, o sufra cualquier otro menoscabo. Para qu le servira a l un corazn fracturado? Nunca
podra venderlo como nuevo. Pensad en la desvalorizacin. sta es una especie de pliza de seguro de
Gminis contra la desilusin. En esto es en lo que difieren. (Quiero decir, sta es una de las cosas en que
difieren.)
La mujer Tauro, que habitualmente respeta tanto todos los tipos de seguro, no tiene un seguro emocional
contra el sufrimiento, una vez que ha entregado su lealtad a otro ser humano. A menos que su Marte o Venus
(o Sol) natal est muy mal aspectado, esta dama lo soportar todo, desde otra mujer hasta la pobreza. Se
desentender serenamente de todas las extravagancias e inconstancias de su hombre regido por Mercurio,
afligido de fobia al altar, y no siempre, pero s casi siempre, triunfar. Si en una carta natal existen
determinadas cuadraturas u oposiciones planetarias, es posible que sea ella quien le destroce el corazn a l al
correr en pos de las quimeras del placer slo para atormentar a su hombre Gminis, cuyo amor es delicado e
igualmente frgil. Pero sta es la excepcin a la regla, y la Tauro media se quedar plcidamente sentada
frente a la chimenea, tostndose los dedos de los pies y contando tranquilamente los das que transcurren entre
las visitas de su amante.
Los amigos de esta mujer sentimental intentarn hacerle ver que posiblemente est desperdiciando su
vida, pero no los escuchar. Insistir tercamente en que las demoras que aplazan su matrimonio son vlidas,
y que maana, la semana prxima, el mes prximo, el ao prximo... todo se arreglar. Ellos se aman, y el
amor puede lograrlo todo, no es cierto? S, es cierto. Pero no cuando el amor ciego, como a veces lo es el de
Tauro. A una mujer Tauro que est convencida de que tiene razn es difcil hacerle entender la verdad...
verdad que consiste en que tal vez no est todo perdido, si ella se da cuenta del peligro que entraa un
callejn sin salida, con tiempo suficiente para revitalizar un poco el romance. Pero quizs ella no quiera
confesar que el panorama no es tan alentador como podra serlo. Aunque es muy sensata respecto de todo lo
dems, puede ser increblemente necia cuando se trata de su propia seguridad emocional. Si l tiene la Luna
en un signo de Tierra o de Agua, o si ella tiene la Luna en un signo de Fuego o de Aire, cuentan con ms
posibilidades de mantenerse unidos, supliendo recprocamente sus carencias. Y ste puede ser un arreglo

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muy satisfactorio.
El hombre Gminis se aburre rpidamente de una misma mujer, pero esto no implica necesariamente que
le sea infiel. Lo que sucede es que le gusta examinar las diversas caras de la chica que ama, verificar los
matices de sus facetas emocionales... algo as como mirarla a travs de espejos deformantes, para encontrar
distintos estados de nimo. Pero la mujer Tauro slo tiene tres estados de nimo: el de dulce y afectuosa
satisfaccin, el de melancola taciturna... y el de clera furiosa. Es posible que el hombre de Mercurio desee
secretamente que ella los alterne con algunos caprichos impulsivos, alguna excitacin descuidada o algn
juego del escondite en el mbito emocional, de vez en cuando. Quizs ella aborrezca el cambio, pero la
mujer enamorada de un par de Gemelos geminianos deber aprender a adaptarse a nuevas pautas.
Si ella intentara hacer algo nuevo y delirante cada semana, quiz le tomara el gusto. No tiene por qu ser
algo tan extravagante como emprender viajes astrales o reunirse para fumar opio. A lo mejor bastar con que
se peine con la raya del otro lado, para variar (cuando una chica Tauro procede as, la seal est clara para el
hombre que sabe leerla), o con que cambie la marca de su aceite de bao, o con que mezcle algunas setas con
la berenjena. Tal vez incluso podra tratar de pedir excusas cuando se equivoca, en lugar de enfurruarse. La
mujer Tauro tiene una manera especial de tomar partido, y de mantenerse en sus trece, negndose incluso a
escuchar disculpas, y ms an a concertar una transaccin. Esta chica no se da cuenta de lo cruel y fra que
parece, una vez que ha tomado una decisin y ha cerrado la puerta a todo debate ulterior.
Desde el punto de vista sexual, es posible que se infiltren en su relacin los mismos problemas de
antagonismo entre el cambio y la terquedad. Ella quiere que la amen como corresponde, y a su juicio, la
expresin fsica de dicho amor debe ser una experiencia rica y total. Espera de su amante una satisfaccin
sensual y completa, y la retribuye en igual medida. La mujer Tauro piensa que el sexo es estupendo porque
engendra criaturas dulces y mimosas y porque al mismo tiempo genera paz emocional y satisfaccin fsica:
una triple bendicin. Cuando hace el amor, ste no tiene nada de vaporoso. Ella quiere sentir que su hombre
est all, a su lado, ntegramente all, todo l y no slo las partes de su ser que no utiliza mientras suea
despierto. Como es posible que la mente Mercurial de l ande vagando con el viento, tambin es posible que a
ella la disguste lo que interpreta como su falta de pasin terrenal, su actitud informal. Y es posible que a l le
disguste lo que interpreta como la intromisin de ella en el mbito privado de sus emociones, que el Gminis
considerar sagrado aun en sus momentos de mayor intimidad. Quizs ella deba persuadirse a s misma de
que le conviene ensayar varias tcnicas distintas para bajarlo de la nube en la que est posado y devolverlo a
sus brazos. De lo contrario, es posible que l se harte de aletear contra un muro de piedra, y que se torne ms
desapegado. Sin embargo, quizs l ser ms feliz de lo que sospecha si permite que ella le muestre el camino
que conduce a un afecto ms profundo, para lo cual deber confiar en sus vibraciones venusinas ms
instintivas, y en su naturaleza mundana, en lugar de andar flotando a la deriva, fuera de contacto, cuando ella
lo necesita tanto. Todos los signos de Aire tienden a desconfiar, vagamente, del sexo, a menos que ste haya
sido tamizado antes por la imaginacin, lo cual lo despoja a veces de su misma esencia. El hombre Gminis
quiere diluir su experiencia sexual en dosis variables de ficcin y fantasa.
Conozco a una mujer Tauro que es inusitadamente clarividente, dada la condicin normalmente no esotrica
de su signo solar. (Sabed que esto sucede, incluso, con las Cabras y Vrgenes de sexo masculino y femenino.
El famoso clarividente Peter Hurkos es un Toro... con Neptuno en poderoso trgono, claro est.) Esta dama
Tauro especfica estuvo profunda y sinceramente enamorada de un Gminis peripattico de California,
durante ms aos de los que podra olvidar, y quizs an lo est, con su testarudez tpica. Entre sus
respectivas cartas natales haba varios trgonos de Neptuno y stos creaban una rara telepata emocional que
ellos utilizaban para comunicarse sin necesidad de recurrir al telfono o el correo. A veces, su extraa
percepcin extrasensorial los una cuando estaban a muchos kilmetros de distancia, y no slo mental y
emocional y espiritualmente. Tambin generaba entre ellos una unidad fsica. Una vez me coment que le
haba dicho a l que crea estar casi en condiciones de... concebir un hijo mediante su poderosa proyeccin
mutua, y que no se senta preparada para ello, porque no estaban casados. (El humor realista de Tauro.) sta
es una unin poderosa. Poderosa, en verdad.
Pero los deseos gemelos y geminianos de l nunca se fusionaron en un solo sueo en el que ella pudiera
confiar. Finalmente, le ley el pensamiento (invirtiendo su truco mercuriano), no vio all nada ms que
promesas efmeras, y cort el cordn teleptico que los una con las fras y afiladas tijeras de la decisin
taurina. Ahora l ya no puede alcanzarla, ni astralmente ni por otra va. Ella se niega a atender su telfono o
su corazncuando suenan. Sabe cundo es el Gminis quin la llama. Pero no se conmueve. Esta mujer
Tauro clarividente sigue siendo un Toro. El talento metafsico no hace mella en su voluntad de hierro... una

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vez que ha tomado una decisin firme.


O sea que el hombre Gminis no siempre es inocente cuando su relacin con un chica Tauro se embrolla
tercamente. l puede atarse a su propia rutina. Podra detenerse, durante una de las revoluciones del tiovivo
de luces y sonidos cambiantes, y preguntarse si an sigue oyendo la misma msica del organillo que oa
cuando mont en l para dar la primera vuelta. Una meloda sin palabras... una historia sin fin... una rotacin
alrededor de un crculo que no lleva a ninguna parte sino de nuevo al principio. Cuntas anillas de bronce
debes coger para que tintineen en tu bolsillo... donde se enmohecen y se empaan... hasta manotear la de oro
macizo?

Hombre TAURO Mujer GMINIS


l amaba las flores (segn me han contado) y la dulce msica (l mismo no era un mal
intrprete de clavicordio); y, seamos francos, la naturaleza idlica de la escena lo conmovi
profundamente. Dominado por lo mejor de su personalidad habra vuelto renuentemente al
rbol...
Alguien escribi-alguna vez un poema acerca de un hombre al que nada poda detener: ni la lluvia, ni la
tormenta, ni las tinieblas de la noche podan disuadirlo de recorrer el trayecto estipulado. La cita ha sido
aplicada a un cartero. Pero ciertamente deba de tratarse de un cartero Tauro, que probablemente iba a
entregar una misiva romntica.
La pasin lenta, devoradora, del Toro, no se estimula fcil ni rpidamente. Crece en l, podra decirse, casi
insidiosamente, infiltrndose poco a poco, y acumulando una gran fuerza a medida que prosigue su desarrollo
furtivo. Una vez que los sentidos de este hombre han sido cautivados, o que se ha conmovido su corazn
gobernado por Venus, raramente, o nunca, se retractar de su eleccin (a menos que su Luna o ascendente
est en Gminis, Sagitario o Piscis). Su actitud instintiva respecto del compromiso es de consagracin total, y
perseverar hasta el amargo (o dulce) final, afrontando la lluvia, la cellisca, la nieve... e incluso, a menudo, los
inesperados huracanes de clera o los tornados de emocin de la chica Gminis. El hombre Tauro funciona,
por s solo, como los antiguos servidos de diligencias.
Nada ni nadie, ni los reparos por su reputacin (que normalmente es lo que ms le preocupa), ni las
opiniones negativas de parientes o amigos, detendrn o harn vacilar aunque slo sea ligeramente a este
hombre, en general sensato, cuando se ha enamorado. Apenas un Tauro normalmente prctico cae en una red
romntica, su sentido comn queda sepultado bajo el nuevo sentido que acaba de descubrir, el sentido de
tocar, or, oler y ver a la chica de sus mansos pero no por ello menos profundos ensueos. Es capaz de
formular promesas de fidelidad eterna, y de cumplirlas: fiel, estable y leal casi hasta lo inverosmil. Una vez
enamorado en serio, Tauro lo est para siempre. Si la relacin no se encamina hacia un final feliz, es posible
que el Toro languidezca con el corazn destrozado, o que se ahogue en otras experiencias sensuales, como la
de convertirse en un alcohlico melanclico (uno de los errores ms espantosos que puede cometer un Tauro),
o en un gourmet glotn, condicin igualmente antinatural para un Tauro, puesto que los instintos ms
refinados del Toro lo inducen a evitar los excesos de cualquier tipo.
Esto suena como la materializacin del ensueo romntico imaginario de toda chica. Menos de la chica
Gminis, cuyos ensueos de amor no son tan omnmodos ni tan mundanos. Gminis es etrea. Gminis vuela
libremente, como una corneta, zarandeada a veces por el viento, cayendo, para volver a levantarse luego
merced al capricho de una brisa pasajera... pero remontndose siempre maravillosamente, captando el sol que
se filtra entre las nubes y devolviendo su reflejo.
Una vez el comediante Orson Bean describi con mucha precisin a una chica Gminis que conoca. Le
pregunt: Cundo cae el cumpleaos de tu marido?. Y ella exclam inmediatamente: Cielo santo! No
tengo marido. Lo dices como si no te gustaran los hombres, coment l entonces, sorprendido. Adoro a
los hombres! A los que no soporto es a los maridos. Bean insisti: Pero por qu? Qu tienen de malo los
maridos?. Gminis reflexion durante slo un segundo, antes de responder: Bueno, son tan
condenadamente posesivos. Por ejemplo, pretenden saber con quin ests citada, y.... Su voz se apag
progresivamente.

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Ahora bien, a la persona media que lea esto, y seguramente a los Toros que lo lean, la respuesta de la chica
Gminis les parecer el testimonio de una atroz promiscuidad sexual. No as al astrlogo. Yo analizo su
contestacin desde otra perspectiva, porque entiendo las ambigedades de Mercurio. Veris, ella era leal a su
personalidad gemela, nada ms. Para Gminis, una cita puede implicar una sesin inocente con la
peluquera, una entrevista con el maquillador, una visita al dentista para hacerse colocar una corona, una
consulta con el psiquiatra o un encuentro con su cuado. Esta mujer siempre est concertando citas para
entrevistarse con los dems, y despus llega tarde o las olvida por completo. No se trata que busque un amoro
o un enredo sexual fortuito, sino slo el encuentro con alguien cuya compaa sea amena, y con quien sea
interesante conversar. Con alguien que estimule su imaginacin. Por lo menos, as es como empieza, y
generalmente no pasa de all, si la entienden bien. Recordad que, a veces, ella se desdobla, y cmo es posible
que un hombre tenga conformes a dos chicas a toda hora del da y la noche? Veris, despus de un tiempo
esto se convierte en una especie de problema matemtico. (Tal vez Tauro no lo vea.)
No es inevitable que su necesidad de ir de un lado a otro, y de alternar en compaa de personas de ambos
sexos, destruya una relacin. Gminis puede estar profundamente entregada a un hombre, aunque necesite, de
cuando en cuando, la compaa de varias docenas de ellos. Pero no pretendis hacerle entender esta necesidad
a un Toro posesivo. Quiero decir que ella podr intentarlo, pero correr un riesgo. Ser mejor que le explique
todo esto antes de casarse, cuando lo nico que l podr hacer ser consumirse a fuego lento y alejarse
enfurecido. Si lo deja para ms tarde, o sea hasta que l piense que ella le pertenece para toda la vida,
exclusivamente, en todo sentido... y slo entonces le informa que sencillamente necesita salir de casa y
brincar con los acrbatas y dar vueltas en la noria gigante de vez en cuando porque se aburre a menudo, y
porque de lo contrario perder la chaveta... es posible que la reaccin de l sea la misma, pero que su clera
no sea tan controlada. El hombre Tauro tpico no tomar de buen talante el descubrimiento de que su mujer
quiere correr ms o menos cada quince das al parque de atracciones. Dadlo por seguro.
Por supuesto, si su Luna ascendente est casualmente en Gminis, Libra, Acuario, Leo o Aries o si
su Marte o Venus natal est en Gminis, en conjuncin con el Sol de ella es posible que todo salga a pedir
de boca. l tendr la estabilidad y la sosegada influencia apaciguadora de su signo solar Tauro para bajarle
afectuosamente los humos a ella cuando lo necesite, pero tambin el aire suficiente para avivarle los
entusiasmos, o el fuego justo para captar l mismo la chispa de la libertad de ella. En cuanto a ella, si su
Luna o ascendente est en Tauro, Virgo, Capricornio, Piscis o Cncer (ayudar que su Marte o Venus est en
Tauro), se conformar con pasar gran parte del tiempo (no todo) mimosamente sentada a sus pies, dejando
que l le rasque la cabeza mientras ronronea como una gatita o muge para imitar su lenguaje de apareamiento.
De lo contrario, a l le resultar difcil comunicarse con ella, y a ella le resultar difcil lidiar con l.
Por ejemplo, en el rea econmica. A ella le encanta gastar el dinero, y l es francamente partidario de
ahorrarlo. En el rea de los alimentos. A l lo obsesiona la idea de consumirlos (aunque generalmente no en
exceso, lo cual depende de las circunstancias), y ella probablemente aborrece cocinarlos. Las ensaladas las
puede preparar con una mano atada detrs de la espalda. Cualquier plato ms complejo preferira dejarlo por
cuenta del chef de su restaurante francs favorito.
A l le resultar muy difcil entender los cambios de humor mercuriales de ella, v esta chica puede
cambiar de humor como algunos cambian de camisa en una zona tropical. Todo empez cuando era nia.
Primero quiso ser monja. Despus quiso ser cura. Cosas por el estilo. Ahora pasa fulminantemente de la
alegra a la depresin, de la generosidad a la avaricia. Primeramente anhela ser actriz, despus desea
graduarse de antroplogo. Es comprensible que el Toro se ponga nervioso cuando ella practica uno de sus
rpidos cambios. Una tarde l llega a casa, le da un fuerte y afectuoso abrazo de oso, y ella lo sobresalta
cuando casi se le desmaya en los brazos.
TAURO: Qu te sucede, cario? Ests blanca como una sbana.
GMINIS: Oh, me siento tan dbil, querido. Por favor, aydame a llegar hasta el sof. TAURO: Pero
qu te pasa, nena?
GMINIS: Veo manchas de colores delante de los ojos y la habitacin da vueltas. Estoy tan mareada. Y
siento un dolor agudo en la cabeza. Tengo los dedos y los brazos entumecidos. Mira... no puedo
moverlos.
TAURO: Dios mo! Llamar inmediatamente al mdico. Ahora qudate acostada y quieta. No te
muevas.
GMINIS: Puedo apoyar la cabeza sobre tu hombro?
TAURO: Por supuesto.

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(Pasan cinco segundos. de reloj.)


TAURO: Cmo te sientes, tesoro? (Levanta el auricular y se dispone a marcar el nmero del mdico.)
GMINIS: Estupendamente! ;Vamos a nadar! ;Hagamos una carrera hasta la piscina!

Oh, no s. Supongo que quiz, despus de todo, un Tauro est en mejores condiciones que la mayora de los
otros hombres para lidiar con este comportamiento. Hay que reconocer que se necesitan nervios de acero para
enfrentar una escena como sta, varias veces por da. Y la mayora de los Toros tienen nervios de acero.

Su relacin sexual puede ser igualmente cambiante. Una noche ella se acurrucar contra l,
inmediatamente despus de cenar, y le susurrar: Rudolph, esta noche quiero que nos acostemos
temprano y que simulemos que estamos en nuestra luna de miel, en aquella cabaita de las montaas de
Suiza>. Bueno, ciertamente despus de semejante insinuacin no hay que darle al Toro un mazazo en
la cabeza.
TAURO: (con pasin palpitante). Espera que apague las luces, cario. Enseguida estar contigo.
GMINIS: (ya en la alcoba). Date prisa, querido, date prisa! Oh, pero mira la Luna! Es tan hermosa,
y las estrellas estn tan brillantes. Creo que le har llegar un deseo a una de ellas...
TAURO: (que ya est arrebujado bajo sus mantas favoritas). Tesoro, quieres hacer el favor de
apartarte de esa ventana y de venir aqu, cerca de m?
GMINIS: Est bien pero sabes dnde est el metro? Quiero medir algo inmediatamente. TAURO: Qu
es lo que quieres hacer?
GMINIS: Quiero medir esta pared, para comprobar si hay espacio suficiente para hacer instalar aqu
una chimenea, como la que tenamos en la cabaa de nuestra luna de miel. No sera romntico?
Alcnzame el telfono, quieres, Rudy? S bueno. Voy a llamar a los carpinteros ahora mismo, antes de
que cierren el taller. Enciende la luz. No puedo encontrar la gua telefnica en la oscuridad, por amor de
Dios.
S, hay que tener nervios de acero. Los Tauro son amantes sensuales, con proclividades erticas y muy
apasionados. Gminis aborda el sexo como si slo fuera otra aventura excitante que transporta al mgico
mundo de hadas de la imaginacin. Todos los Toros tienen un sentido del humor bastante elemental (a veces
un poco grosero) respecto del sexo, pero es posible que l no le encuentre nada de gracioso al hecho de que
ella se evada a cada rato de sus intimidades compartidas para sumirse en su propio mundo privado de fantasa.
Este hombre desea estrujar a una mujer de carne y hueso, no a un hada vaporosa ni a un cuerpo astral. La
mente de ella es su propio campo de juegos, poblado de imgenes fascinantes, pero estas cosas son demasiado
intangibles para un Toro, que tiene los pies firmemente plantados en la realidad. Debern ponerse de acuerdo.
Lo que ms confundir al hombre Tauro en la relacin con su amada Gminis puede resumirse en una
pregunta sencillsima: Quin es ella? Es realmente la mujer que le pertenece, la que durante muchsimo
tiempo ha esperado poseer... o es slo el producto de sus quimeras? l desea realmente remontarse con ella,
volar hasta las nubes, pero no est seguro de saber cmo hacerlo, y estos versos describen su anhelante
desconcierto:
Eres T?
O acaso slo se trata de que te he revestido
con esas tnicas de amor que atesoro
desde aquellos tiempos en que mis castillos de arena eran tan vastos que
se poda pasear por su interior... y tan slidos
que resistan las mareas
no recuerdo quin fue el primero que dijo ojos que no ven
corazn que no siente pero fuera quien fuere se equivoc
suponiendo que trepe hasta la copa del rbol

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y descubra entonces... que no eres realmente T


cmo volver a bajar por mis propios
medios?
siempre he temido a las alturas*

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GMINIS

GMINIS

Aire - Mutable - Positivo


Regido por Mercurio
Smbolo: los Gemelos
Fuerzas diurnas Masculino
-

La relacin GMI NIS -GMI NI S


Daban vueltas y vueltas a la isla, pero no se encontraron porque todos han a la misma
velocidad.

Antes de . los sesos tratando de analizar esta configuracin de signos solar, 1-1,
procuremos desentraar la parte aritmtica. Un Gminis ms un Gminis equivalen a un grupo de cuatro
personas inteligentes, activas (dos pares de Gemelos) que intercambian ideas, ensueos y desafos entre s y
con el mundo en general.
Es posible que de cuando en cuando se bloqueen recprocamente la visin de la vida, porque tienden a
observarla con aumentos distintos, a travs del zoom y el gran angular de sus ojos mercuriales, y a veces
caminan o corren a diferentes velocidades. Sin embargo, en cierto sentido, los cuatro marchan a la misma
velocidad, porque todos entienden sus respectivas ansias de libertad.
Sus vibraciones se irradian desde las mismas frecuencias, y generalmente sus ritmos sincopados son
sincrnicos. El ritmo sincopado puede no ser una msica ortodoxa, pero sirve para componer un jazz
estupendo. El problema consiste en que mientras se zarandean de un lado al otro al ritmo del jazz pueden
desencontrarse en medio del paisaje vertiginoso.
Cuando dos Gminis se fusionan y consiguen que sus vibraciones, ritmos y perspectivas mentales se cian a
una configuracin comn, los cuatro pueden utilizarse recprocamente como vnculos reconfortantes con la
realidad. Desde la base de su empata mutua, pueden salir a cautivar el mundo, volver fugazmente para
sentirse comprendidos, y luego lanzarse nuevamente a otra campaa de seduccin mental. Entiende lo que
digo? Si lo entiende, usted tambin es Gminis, porque todo esto es astrolgicamente exacto, pero al mismo
tiempo encierra un complicado equvoco mercurial. Si no lo entiende, y lee esto para aprender a entender a un
equipo, sociedad o pareja Gminis que conoce, qudese con nosotros, pero preprese para ejercitar los
msculos de su cerebro... y no olvide el paracadas.

El filsofo-astrlogo Alan Watts defini al Hombre (no incluy a las mujeres, pero eso sucedi antes de
que la Enmienda de Igualdad de Derechos les hiciera notar a todos los animales de sexo masculino que
nosotras tambin somos seres humanos) explicando que la individualizacin del Creador, que expresa Su
Esencia total a travs de los muchos millones de almas que habitan la Tierra, se puede concebir como Dios
jugando al escondite consigo mismo. Durante mucho tiempo sta ha sido mi definicin esotrica favorita de
la relacin del hombre y la mujer con el Universo, porque siempre he sospechado que el hombre y la mujer y
sus Co-Creadores forman una unidad, despus de examinar la charada que plantea el Gminis al decir que
estos ltimos crearon a los primeros a su propia imagen y semejanza. Sin embargo, realmente debo corregir
un defecto de esta definicin que por lo dems es profundamente sagaz. Estoy segura de que el difunto, y al
mismo tiempo benvolo y brillante Alan Watts, nos perdonar si parafraseamos as sus palabras: Dios y su
pareja, jugando al escondite con ellos mismos. Ahora queda perfecto. Pero de todas maneras, lo que quera
destacar es que, en el caso de Gminis, nuestros Co-Creadores juegan al escondite con ellos mismos a mucha

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velocidad, con muchos ms escondrijos, y probablemente se sorprenden a s mismos mucho ms que en el


caso de los comunes mortales, que ya estn bastante confundidos con el desafo de ser una sola persona.
Desde luego, todo esto tiene otra cara, la cara individual, y la integridad .de cada alma singular.
El concepto yogui-budista de nirvana est groseramente deformado. Toda esta teora de la fusin
permanente con el Gran Todo es un disparate, metafsicamente infundado y literalmente imposible.
Formamos parte tanto de los cuerpos fusionados como de los cuerpos separados de nuestros Co-Creadores. En
un sentido simblico, los Aries estn cerca de sus cabezas; los Gminis estn cerca de sus brazos, manos y
dedos; los Leo estn cerca de sus corazones, y as sucesivamente. (Confieso que sta es una simplificacin
excesiva, pero bastar para este libro concreto, porque abordar el tema con ms detenimiento en otro
prximo.) Ahora bien, una nariz no es una boca (cundo osteis hablar de una nariz que comiera maz?), un
ojo no es una mano, y una oreja no es un corazn (,quin ha odo hablar de un latido de oreja?). En otras
palabras, usted es Usted. El usted-de-usted nico es ahora, ha sido siempre y siempre ser su personalidad
invididual, y conscientemente no slo durante aquellos perodos en que su ceguera lo separa de nuestros
Co-Creadores, sino tambin despus de que se fusione con ellos, de tiempo en tiempo, e incluso mientras
forma una unidad con ellos.
El secreto de esta ltima condicin de paz, sabidura y poder perfectos est encerrado en la polaridad de
poder-humildad que se expresa a travs de la palabra inglesa atone, o expiar (at-one, o en uno). Slo
cuando usted atone (expe) autnticamente, y comprenda cabalmente el significado de la palabra, podr estar
at-one (en uno, unificado) con Dios y su pareja. Sin embargo, aunque la hazaa de experimentar esta at-onement (expiacin y tambin unificacin), peridica y reiteradamente, es prodigiosa, usted no necesita (en
realidad no debe) mantenerse at-one (expiado y unificado) con Ellos de manera permanente. Esto sera
espantosamente aburrido para la individualidad, as como el hecho de estar inseparablemente fusionado en el
abrazo exttico de la unin sexual, por muy puro que fuera el amor entre las almas gemelas, sera montono y
aburrido si se tratara de un estado eterno, constante.
Este concepto remueve el ncleo mismo de la existencia, que es luz y sombra... el perfecto equilibrio Libra de
la una y la otra... el estmulo de la controversia, igualmente equilibrada con el consenso pacfico, sin
asesinatos, por favor, dentro del necesario sndrome de controversia, sin asesinatos de sexo, personas,
animales o lo que sea. Esto viola todas las reglas del juego del escondite en escala csmica.

Bueno, veamos... Empec discutiendo la relacin del hombre y la mujer con Dios y su pareja, despus pas a
explicar vuestra individualidad, para que todos sepis que vuestros egos personales, sagrados y santos,
nunca pueden ser destruidos mediante la fusin en una eternidad nirvnica con el concepto que cualquiera
tenga de Dios... todo ello en unos pocos prrafos. La esencia de Gminis es extraordinariamente
contagiosa. En realidad, os confesar que aunque todos mis comentarios los he hecho muy en serio, reflejan la
antigua verdad esotrica, hilvan deliberadamente mis palabras en una secuencia de rpidos cambios de
temas, todos los cuales eran distintos si bien se encadenaban coherentemente, para suministraros una sucinta
idea de que es necesario permanecer alerta cuando se entabla cualquier tipo de discusin con un Gminis, y
con ms razn con dos, que en realidad son cuatro.
Veris, a veces el lenguaje equvoco de Gminis ayuda a superponer dos opiniones, aparentemente
antagnicas, en la integridad estereoscpica de la profundidad tridimensional. La tercera dimensin la agrega
el sagaz escucha. Me segus? Sencillamente deberis acostumbraros a los juegos de palabras si pensis jugar
al Pong-Ping verbal con los Gemelos, y el Pong-Ping no es ms que la imagen del Ping-Pong reflejada en el
espejo de Gminis.
Ahora, se os refleja con ms nitidez?
Cada Gminis contiene una imagen refleja exacta e invertida de s mismo (o de s misma): los polos
positivo y negativo de su personalidad. Esto se debe a que cada Gminis simboliza al alma, en su viaje
alrededor de la rueda astrolgica, krmica, cuando experimenta la etapa infantil de conciencia de que no est
sola en el Universo, y cuando comprende tambin que existen dos facetas distintas en el carcter de cada
hombre y mujer, facetas que es necesario armonizar antes de que el individuo pueda relacionarse con los
dems. El problema consiste en que Gminis pocas veces sabe cul de sus personalidades escindidas es la
autntica. Si alguien pidiera (o si nuestros Co-Creadores le pidieran a esta parte de su individualizacin): Por
favor, que el verdadero Gemelo se levante y se d a conocer, se alzaran bruscamente dos personas distintas,
y el juego del escondite empezara de nuevo.

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Naturalmente, entonces, cuando un par de Gemelos deciden entrelazar sus temperamentos, el enredo puede
ser maysculo. Hay unos pocos Gminis que son capaces de encontrarse a s mismos en medio de la mirada
de disfraces y de deseos encontrados de sus naturalezas. El regente de Gminis es el embaucador Mercurio, el
planeta de la velocidad del rayo (aunque no tan veloz como el vertiginoso Urano), que obliga a este
hombre, mujer o nio a probarse un millar de caras, y a descartarlas luego, en el curso de una bsqueda
impaciente de la identidad personal.
La intencin de la mascarada es lo que separa a los hombres de los nios, a las mujeres de las nias, y a
Escorpin de Gminis... si esto es lo que os preguntabais. Escorpin cambia de careta con un propsito
totalmente distinto, el de desconcertaros deliberadamente, en tanto que Gminis slo trata de decidirse y saber
cul es la cara que corresponde a ese lugar. No, sta es la indecisin de Libra. Ensayemos de nuevo. Gminis
se prueba las mscaras con el fin de descubrir cul es su verdadera personalidad. La indecisin no tiene nada
que ver con esto. En realidad se trata de un anlisis detallado.
Esto ya lo dije? S, lo dije. Acabo de darme cuenta. Dije lo mismo en el final de la ltima oracin del
prrafo anterior.
Bueno, acostumbraos a ello. Los Gminis se repiten a menudo, dicen las cosas dos veces. Por ejemplo,
preguntan: Qu hora es?... esperan ms o menos un segundo, y repiten: Qu hora es?, antes de que
tengis tiempo de contestar que son las y media o las menos cuarto, en razn de lo cual es un poco difcil
conversar con ellos de manera sincronizada. A veces. Pero no siempre.
Como Gminis es un signo de Aire, mental, estas personas sienten la necesidad de devanarse los sesos
casi continuamente, incluso en sueos, pensando, teorizando, imaginando, proyectando, condenando,
apoyando, descartando, seleccionando y analizando los hechos concretos y objetivos... al mismo tiempo que
corren en pos de su ensueo visionario. Ya veis por qu todos ellos son rompecabezas humanos.
Los regidos por Mercurio merodean por el mundo, ya sea mental o fsicamente, o de ambas maneras a la
vez, en busca de un esquivo ideal de verdad y felicidad perfectas, y despus retornan a menudo al hogar para
escuchar a un pjaro que gorjea en un rbol muy alto: el mismo pjaro, el mismo gorjeo y el mismo rbol que
conocieron en su infancia. Despus de viajar por todos los continentes mentales de su imaginacin, a veces
comprenden al fin, si tienen suerte, que sus sueos ms autnticos los soaron cuando la percepcin de la
infancia estaba despejada y no haba sido contaminada por la lgica y el cinismo adultos.
Cualquier combinacin de la configuracin de signos solares 1-1 trae consigo la satisfaccin excepcional
y nica de la asociacin con una persona tan parecida a uno mismo (o a una misma) que no hay mucho que
temer al rechazo de personalidades... aunque siempre existe el peligro de una preponderancia de las
caractersticas similares. Una relacin Gminis doble es particularmente reconfortante para cada uno de sus
cuatro componentes, porque siempre tranquiliza tener un camarada, pariente, vecino, socio, amante o
consorte que est tan embrollado como uno mismo. Esto ahorra muchas explicaciones y disculpas
cansadoras. Pero tambin puede ser extenuante para el sistema nervioso, por la frustracin que experimentas
constantemente cuando tratas de embaucar a alguien que prev todas tus maniobras y racionalizaciones.
Por lo menos a estos signos solares, cuando forman pareja, les resulta ms fcil reconocerse mutuamente
de lo que le resultara a un extrao reconocer a cualquiera de los cuatro. Ayer, Gminis era un alma mansa,
tmida y modesta, un poco indiferente, tranquila y reflexiva, con accesos circunstanciales de melancola y
aoranza-. Hoy, este mismo Gminis es cnico, sarcstico, irritable, injurioso... y est muy alerta, con sus
sentidos aguzados. Es posible que maana est sosegado y que sea equilibrado y conservador hasta el punto
de parecer francamente soso. Luego, sin la mejor advertencia previa, Gminis se convertir en un fuego
fatuo, que esparcir ensueos como si fueran gotas de limn, que diseminar ideas como si fueran confetti,
impaciente, anhelante, tan activo en el plano fsico como comunicativo en el plano verbal e inquieto en el
emocional. A todos nos resulta tremendamente desconcertante, pero an ms al Gminis mismo. Especialmente si ste (o sta) se halla ligado a otro Gminis por un vnculo estrecho. Entonces, por supuesto, el
desconcierto se duplica y es dos veces ms torturante.
La naturaleza embaucadora del planeta regente de Gminis, Mercurio, se oculta siempre tras el intelecto
agudo de los Gemelos, y se manifiesta en todo tipo de detalles de mayor y menor envergadura. Un excelente
ejemplo es el Gminis Bob Hope, el comediante que descerraja sus andanadas de chistes como una
ametralladora, a tanta velocidad que casi tropiezan unos con otros a medida que los cuenta. Alguna vez
prestasteis verdadera atencin a una de las ms largas sesiones cmicas de Hope? Una de esas en que recita
un monlogo de quince minutos o media hora, y no de aquellas otras en que lanza pullas espordicas al
pblico que asiste a la distribucin de premios de la Academia de Cine. En una sesin ms larga, es muy
evidente la forma en que Mercurio se complace en embaucar a la gente y tomarle el pelo.

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Ms o menos cada dos minutos, el Gminis Hope har un comentario que, analizado con detenimiento,
significa esencialmente: Preparaos, amigos. En seguida pondr fin a la funcin y har mutis por el foro.
Pero despus contina. Al cabo de un par de minutos (o incluso de un minuto o de unos pocos segundos)
suelta otro chascarrillo, insinuando lo mismo. Pero contina. La prxima vez escuchadlo con atencin.
Comprobaris que ste es el esquema constante de las bufonadas del Gminis Bob Hope. Mercurio lo incita a
esmerarse por embaucar a su auditorio reiteradamente, lo cual es una prueba de su astucia, porque as los
escuchas de Hope le prestan ms atencin: los han inducido a pensar que cada chiste es el ltimo de la noche.
Bob Hope tiene la reputacin, harto merecida, de ser quien mejor sincroniza su comicidad en el mundo del
espectculo. ste es un talento que hered directamente de la influencia de su regente solar, Mercurio. El
ingenio de la comediante Bea Lillie es igualmente agudo e incisivo, y su sentido de la sincronizacin del
humor es tan exquisito como el de Hope. Ambos nacieron en Inglaterra, Bea y Bob tienen narices
asombrosamente parecidas, ambos se hicieron famosos por los espectculos que montaron para las tropas... y
ambos nacieron el mismo mes, el mismo da, el mismo ao, en las mismas latitud y longitud, a pocos minutos
el uno del otro. Gemelos astrales. Seguiremos desarrollando el tema en un prximo libro.
Una fusin de Gminis y Gminis tiene la ventaja de crear una atmsfera de libertad de pensamiento y
movimiento, de modo que sus intelectos combinados pueden entrar en accin sin el lastre de pequeos celos,
desconfianzas y restricciones (admitiendo, como siempre, la posibilidad de que influya un signo lunar o
ascendente ms conservador). Incluso en este ltimo caso, el clima emocional que imperar entre los dos ser
relativamente libre y desenvuelto, y les permitir ejecutar juntos muchos trucos y capturar muchos sueos.
Los dos se aguzarn mutuamente el ingenio, generalmente perdonarn y olvidarn rpidamente... y casi nunca
tendrn problemas de aburrimiento.
Pero su asociacin tambin tiene desventajas, y debern enfrentarlas y encontrar la forma de eliminarlas,
conjuntamente. Desprovistos de la estabilidad de los signos solares ms prosaicos y menos complicados,
Gminis y Gminis podrn tentarse mutuamente a esparcir sus talentos a los cuatro vientos, sin que ninguno
de los dos se muestre dispuesto a frenar al otro ni pueda suministrarle la paciencia y fiabilidad indispensables
para el xito, ya sea en el nivel emocional o en el material. Es posible que, al verlos, sus amigos recuerden la
imagen de dos globos de colores llamativos, inflados con una mezcla de helio feliz y aire caliente, que se
divierten mucho y lo pasan maravillosamente flotando entre las nubes, pero que no van a ninguna parte en
particular. Con esta combinacin, sus signos lunares escribirn el desenlace de la historia. Si existe un aspecto
desfavorable entre el signo lunar de la carta natal de uno de ellos y el signo solar Gminis del otro, podrn
componer encantadores poemas o piezas de jazz, podrn pintar las nubes de plata o la ciudad de rojo. Pero
pocos de sus sueos y planes levantarn vuelo, y si despegan, podra producirse un aterrizaje de emergencia.
O tambin es posible que sus globos se remonten por el aire a demasiada velocidad y que despus se pierdan
de vista, porque no estaban anclados. Igualmente podrn conseguir que las cosas funcionen armoniosamente,
pero para ello debern ser ms cautelosos y menos informales.
Sin embargo, con un aspecto luminario favorable entre sus soles y lunas, ciertamente sus
innovaciones creativas, sus descubrimientos cientficos, sus logros intelectuales, su seguridad material... e
incluso su percepcin espiritual, no tendrn lmites. En cuanto a la dicha y la armona emocional, bueno... esto
depende realmente de ellos. Los Gminis fabrican sus propias emociones para venderlas, conservarlas o
regalarlas. Qu buscan estos Pjaros de Mercurio en el viento que sopla ah fuera? Sea lo que fuere, es algo
que trasciende lo visible y tangible. Un Gminis podra preguntrselo al otro, pero las respuestas que recibirn
sern exactamente las mismas que habran recibido si los Gemelos se hubieran formulado las preguntas a s
mismos.
GMINIS: Qu buscas?
GMINIS: No estoy seguro. Pero cuando lo encuentre, sabr qu es. GMINIS: Y
dnde crees que lo encontrars, con exactitud?
GMINIS: Dnde? Vaya, prcticamente en cualquier parte, supongo...
Y sin embargo, sucede con demasiada frecuencia que el ltimo lugar donde a los Gemelos se les ocurre mirar
es el patio de los fondos de su propia casa, donde es posible que el milagro que buscan los est aguardando
desde siempre.
Posdata de la autora a Gminis:

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Como esto no ha sido corregido en ninguna edicin actual o pasada de mi primer libro, Sun
Signs (Los signos del Zodiaco y su carcter), me gustara decir que la mencin de Marilyn
Monroe que figura en la seccin destinada a la Mujer Gminis pretenda ser una descripcin
exacta del ascendente Gminis de Marilyn y de su Marte-en-Gminis. Cierta investigacin
indica que cuando Marilyn naci era en realidad un signo solar Aries. Las partidas de
nacimiento no son siempre fuentes infalibles de informacin como muy bien sabe cualquier
astrlogo profesional.

Mujer GMINIS Hombre GMINIS


Bueno, entonces podramos seguir adelante dijo John.
Eso es lo malo, John. Tendremos que seguir adelante porque no sabemos cmo
detenernos.
A veces este hombre y esta mujer aunque sera ms apropiado llamarlos muchacho y chica, cualquiera que
sea su edad cronolgica ilusoria se sienten atrados mutuamente sin ninguna razn- ms concreta que la de
que es divertido tener a alguien que cruce la calle contigo en las esquinas. Si este acompaante es un Gminis,
puedes intercambiar rpidas apuestas mutuas acerca de si habr tiempo para cruzar con la luz verde antes de
que el semforo vire al rojo. A pie o en automvil. Es emocionante. Peligroso, pero emocionante.
Claro que parece absurdo, pero pasando de las intersecciones de calles a las salas de estar, las oficinas o las
aulas, ste es un buen ejemplo del tipo de competiciones de ajedrez y damas mentales que el Gminis entabla
consigo mismo y con el otro. Cuando pasis mucho tiempo solos, se os pueden ocurrir toneladas de ideas
absurdas. Los Gminis no parecen estar solos, pero lo estn. Te sientes solo cuando cavilas y deambulas,
codendote con personas asustadas, sermoneadoras, para las cuales el nico juego importante es el que t
ganas por el solo hecho de sobrevivir. Sobre todo cuando sabes que hay cosas mucho ms importantes y
fascinantes que el limitarte a seguir viviendo. En verdad, muchos Gminis concuerdan de todo corazn con el
aserto de Peter Pan, quien, regido por Mercurio, afirma que morir, sera una aventura portentosa, quiz la
mayor de todas!
Eres un Gminis, has pasado toda tu vida buscando y aprendiendo, as que, por qu la muerte habra de
ser distinta? Como ese algo esquivo que has estado tratando de atrapar, expresar o definir desde que tenas
ms o menos cinco aos. Es cierto que los Gminis pocas veces revelan su soledad interior. Pero no me
sorprendera que se deba a que apenas tienen conciencia de ella. Con suficiente prctica, una persona puede
convertirse en una experta en el manejo de la soledad. Es como andar en bicicleta. Exige mucha
concentracin al principio, pero despus de un cierto tiempo ni siquiera notas tu propio equilibrio o pedaleo...
slo sientes el movimiento y el viento que te agita el cabello.
Como todos los Gminis tpicos son por naturaleza conversadores locuaces y brillantes, es posible que
cuando se encuentren dos de ellos ambos hablen hasta por los codos, lo cual produce la impresin de que no
piensan seriamente el uno en el otro. Sin embargo, detrs de toda esa chchara, s piensan... ms seriamente
de lo que cualquiera de ellos confesara al otro. Normalmente, el dilogo entre los dos lanzar destellos de
ingenio y chispas de imaginacin. Les dar tiempo a ambos para estudiarse recprocamente, mientras todas
esas cintas de conversacin ondean encima y alrededor de ellos. Pero stos dos nunca se dirn todo lo que
piensan, ni siquiera aos ms tarde, cuando se hayan amado durante el tiempo suficiente para convencerse de
que pueden confiar el uno en el otro. Siempre se ocultarn algo.
Es posible que ella piense para sus adentros: Es curioso que cuando amas tanto a alguien, y has tenido
tanta intimidad, tengas que reprimirte y recordar que hay cosas que no le debes decir, cosas que realmente no
puedes compartir hasta el fin. Bueno, cuando l ignora tanto acerca de ella, es justo que haya cosas que l
tambin le oculta. Acaso imaginis que cuando los Gminis charlan, vierten en una cascada de palabras todo
lo que sienten? Oh, no. Si eso es lo que pensis, no entendis a este hombre y esta mujer... este muchacho y

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esta chica.
Una mujer regida por Mercurio, enamorada de un hombre Gemelo geminiano, tal vez deba saber algo que dijo
una vez el empresario de espectculos Mike Todd. A Todd, el conversador ms prolfico del que se tiene
noticia en cualquier poca, en cualquier lugar, en cualesquiera condiciones lo estaba entrevistando un
periodista sagaz, que le pregunt:
Mike, sabe por qu habla sin parar? Para evitar decir algo. sa es la conclusin que he sacado.
De veras? Mike se call sbitamente y enseguida se puso en guardia.
Lo que me preocupa continu el reportero, es... bueno, me pica la curiosidad. Qu es ese algo que
no quiere decir, y para callar lo cual habla tanto y tan deprisa? sa es la autntica historia que se oculta tras
la verborrea, verdad?
Mike se limit a ostentar la sonrisa triangular de Gminis y respondi:
Escuche, amigo, cuando yo paro de hablar, todos paramos de comer.
Era cierto, desde luego. Sin el talento de Gminis para expresar las ideas con vvidas imgenes verbales, la
gente disfrutara de mucha menos magia en este mundo srdido y gris, mucho menos dinero cambiara de
manos, se soaran menos sueos... o seran menos numerosos los sueos que se materializaran. Pero lo
importante es que la chica Gminis recuerde que Mike eludi contestar la verdadera pregunta del periodista,
con la tpica destreza mental de Mercurio.
Como nadie puede afirmar con exactitud cmo naci Mike Todd, me han preguntado por qu lo defino
como Gminis (aunque cualquier chica enamorada de un Gemelo entendera el por qu). l dio
aproximadamente cinco fechas oficiales a la prensa, y discrep vehemente con su familia respecto de
varias otras, todas situadas entre el 18 y el 23 de junio. Cmo s, entonces, que Mike era Gminis? Por sus
zalameras y su hechizo. Pero sobre todo, por la forma en que se bata con su fecha de nacimiento, luchando
contra la tercera edad como si estuviera seguro de que iba a vencer. En cualquier momento dado de su vida,
pareca tener veinte aos menos de los que en verdad tena, cualquiera que fuese su edad, y nunca envejeci
realmente. Slo un Gminis podra haber apostado un capital de viejas esperanzas a todo o nada y podra
haber ganado as los dos premios mayores: La vuelta al mundo en 80 das y Elizabeth Taylor... un doble
triunfo que puso fin a la bsqueda incansable de ese Gminis ansioso por redondear su vida. Poco tiempo
despus, su hijo Libra, Michael Todd, coment: Pap, ahora derrochas tu dinero tan prdigamente como
cuando no tenas un centavo. Mike nunca ahorr para los aos de las vacas flacas, as que las vacas nunca
enflaquecieron. Bueno, quiz perdieron unos kilos, pero nada ms. Mike Todd no descubri el Pas de Nunca
Jams. l lo invent. Como Peter Pan, el eterno Gminis, ocult su edad a los adultos curiosos,
preocupados por la cronologa. Y tambin les ocult unos cuantos secretos ms.
Por lo menos el 75 por ciento de los Gminis tienen un apodo, un seudnimo, o un alias, o de alguna
manera ostentan ms de un nombre en el curso de su vida, y Mike tambin tuvo dos nombres. Cuando naci
se llamaba Avrom Hirsch Goldbogen, y un da adopt impulsivamente el nombre de Mike Todd, sin ninguna
razn especial. Su hijo ya haba nacido y l ya lo haba llamado Michael. As que el Gminis Mike Todd
adopt en verdad el nombre de su hijo y se convirti en tocayo de ste, en lugar de que fuera a la inversa.
Podis estar seguros de que los Gminis pondrn las cosas al revs y patas arriba, en pequea y gran escala.
En cuanto al secreto de Mike que, segn adivin correctamente el reportero, su entrevistado guardaba
dentro, el hombre o la mujer Gminis no es reservado de la misma manera en que lo son los Piscis, los
Cncer y los Escorpin... ni lo es por las mismas razones que stos. Slo se trata de que alimenta algunas
ideas encumbradas que no puede atrapar y expresar verbalmente, a pesar de su locuacidad mercurial. Qu
palabras podran describir el anhelo inefable de descubrir literalmente el Shangri-La?
Si esto es tan bello piensan todos los Gminis, tiene que existir algo an ms bello all lejos, en alguna
parte. Podremos encontrarlo juntos? O acaso algo tan especial nicamente lo puedes encontrar solo?. Cada
vez que los Gminis tocan alguna maravilla, Mercurio slo les permite absorberla y disfrutarla muy
fugazmente. Slo hasta que su personalidad gemela secreta susurra seductoramente: Ah, s! Pero qu otra
cosa, aun ms perfecta, podramos descubrir? El deleite que experimentas actualmente no es ms que la
prueba de que all lejos aguarda un goce an mayor... un goce ms autntico, ms emocionante, ms
satisfactorio, siempre que tengas el coraje necesario para correr en pos de l. Cmo sabes qu es lo que

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puede haber a la vuelta de la prxima esquina, del prximo beso, del prximo ensueo, de la prxima
promesa? No te detengas ahora, no te vuelvas an! Sigue adelante..., sta es una llamada ms tentadora que
la cancin de Lorelei, y embruja a todos los corazones regidos por Mercurio.
La chica Gminis re durante la mayor parte del tiempo. De cuando en cuando, con menos frecuencia, llora.
Esto ltimo se debe a que el nudo de soledad que lleva en la garganta se ha vuelto tan asfixiante que debe
trocarlo en lgrimas, porque de lo contrario tal vez ese sentimiento sencillamente la matara. Ah,
personalidad gemela! Dnde ests ahora, cuando te necesitan? Persiguiendo estrellas y corriendo carreras
con el viento? El hombre Gminis entender su fugaz acceso de Weltschmerz, con una sensibilidad delicada
que sorprende en alguien a quien siempre lo acusan de ser fro e indiferente. No obstante su naturaleza curiosa
e inquisitiva, no formular preguntas cuando intuya que la mujer Gminis que l ama languidece vctima de
su tremenda soledad inexpresable e inexpresada (incluso a l) porque su Gemelo la ha abandonado
temporalmente. Probablemente l, fingir no notarlo, y disimular su preocupacin con un comentario frvolo
como... Arrojmonos nosotros en el pozo de los deseos, en lugar de echar monedas, y veamos qu sucede!.
O quiz... Vamos, compraremos dos billetes de ida y vuelta a Irlanda, y nos haremos el amor sobre la Blarney Stone!. Entonces le besar suavemente la mejilla y le dir, en voz muy baja: No te preocupes. Aqu
estoy.
S, en parte se debe a que l entiende el pnico repentino que experimenta su chica Gminis cuando su
Gemelo desaparece y la deja para que se apae sola, como si fuera media persona, porque su propio Gemelo
tambin le hace esta trastada. Pero si procede con tanto tacto y ternura en semejantes circunstancias ello no se
debe slo al hecho de que sabe lo que siente una persona nacida bajo su mismo signo. Se trata de que l... Oh,
acaba de ocurrrseme la palabra exacta. Gminis nunca es torpe. Cualquiera que sea el trance por el que pasa
el ser amado regocijante o trgico, relajado o tenso el Gminis (o la Gminis) tpico puede controlar la
situacin, cuando quiere, con mucha desenvoltura, manejando el bochorno, el miedo o la clera con increble
sutileza. Ejecuta escamoteos de prestidigitacin, y en verdad muchos Gminis son magos profesionales, junto
con los Acuario, Piscis y Escorpin. Sin embargo, estadsticamente, hay ms magos Gminis, porque stos
son asombrosamente diestros con las manos. Tambin lo son con la mente... y en cuanto al corazn de
Gminis, ste contiene muchos pequeos compartimientos en los que oculta compasin, dulzura, sorpresas,
humor, esperanzas y rayos de sol. Algunos de ellos permanecen cerrados durante toda la vida, y slo otro
Gemelo tiene la llave maestra.
Es posible que dos Gminis enamorados se pregunten, el uno respecto del otro: alguno de esos
compartimientos contiene una cualidad llamada lealtad o fidelidad? S. Pero la puerta de este
compartimiento especfico del corazn de Gminis est hermticamente cerrada, y se necesita algo ms que
una llave maestra para abrirla. Hace falta confianza. Y hace falta tiempo. Dos tipos de confianza: la total, que
cada uno debe depositar en el otro... y la indispensable para creer en ti mismo, en el hecho de que lo que amas
es realmente lo que necesitas y lo nico que siempre necesitars. (Para esto es para lo que hace falta tiempo.)
Pero el tiempo no cuesta nada. Ambos podrn utilizar todo el que deseen para encontrar esta respuesta dentro
de ellos mismos... y una vez que la encuentren y que la puerta se abra, Gminis ser eternamente leal y fiel.
Sin embargo, probablemente es exagerado pretender que l o ella renuncie definitivamente a flirtear,
fascinar, provocar, persuadir o slo a hablar con miembros del sexo opuesto (o del suyo propio). Pero
Gminis vive en el plano mental, esencialmente en el reino de la imaginacin, y por tanto es posible que se
conforme a menudo con mantener las relaciones humanas en ese mismo plano. Y as, a veces a estos dos les
resulta ms fcil ser tcnicamente fieles el uno al otro que evitar las fantasas peridicas. Igualmente, es
posible que la chica de las fantasas de l sea en verdad ella... y que el chico de las fantasas de ella sea en
verdad l. Es divertido urdir quimeras de tiempo en tiempo, nada ms. Cuanto ms verstiles sean como
individuos, en su vida personal o en su carrera, tanta menos necesidad experimentarn de imaginar: Me
pregunto que pasara si ella... o Me pregunto qu pasara, para variar, si l....
Si ella qu? Si l qu? Cualquier cosa. Absolutamente cualquiera. Algunos Gminis incluso imaginan
un agravio o un enfado, y despus se separan porque se preguntan qu sensacin les producir la ruptura.
Cuando lo averiguan, vuelven corriendo el uno al otro para redescubrir la realidad del amor. No, no fue un
sueo. FABULOSO! Qu delirio! El amor es autntico. Es autnticamente autntico. Casi podis confiar
realmente en l. S, casi, realmente! Es posible que semejante descubrimiento deje atnito al individuo
medio, pero debis recordar que los Gemelos pasan su vida ntegra separando lo posible y lo probable de lo
seguro... y el amor les suministra una eufrica vislumbre del Shangri-la.

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Estos dos se asocian fsicamente, mediante el amor sexual, con la configuracin calidoscpica que es lgico
esperar cuando el Aire se une al Aire, bajo la supervisin del verstil Mercurio. Es un amor ligero, a menudo
tempestuoso, que unas veces se exacerba hasta trocarse en huracanes de pasin, y otras se mitiga hasta
trocarse en un afecto manso y afable. Las formas en que expresan su amor en el plano fsico son tan
multifacticas, sensibles y cambiantes como las formas en que lo expresan en los planos mental y emocional,
y esto puede transportar su comportamiento sexual desde los abrazos acrobticos sobre la Blarney Stone
hasta los ayuntamientos subacuticos o en helicptero. Cualquier deseo que pueda experimentar un Gminis,
el otro puede satisfacerlo, con el fresco roce de una brisa primaveral o con el clido azote tropical de un
monzn. Si dos Gminis que contemplan la posibilidad de entablar una relacin desean comprender el
potencial de su compatibilidad fsica, les bastar con usar la imaginacin. Prcticamente las nicas palabras
que no se aplicarn a sus posibles pautas de experiencia sexual sern: profundas, terrenales y sensuales. Pero
Gminis y Gminis pueden imaginar juntos algunas palabras satisfactorias para sustituirlas. Mgicas es una
de ellas.
Algunas mujeres Gminis estn tan patticamente ansiosas y perdidas como la Gminis Judy Garland, y
corren en pos de un arco iris que siempre parece eludirlas. Otras son tan vivaces y optimistas como Nancy, la
hija Gminis de Frank Sinatra. Algunos hombres Gminis se sienten tan desorientados e interiormente
inseguros como el actor Errol Flynn, regido por Mercurio... y otros son tan audaces y confiados como los
Gminis Mike Todd y Al Jonson (Amigos, an no habis odo nada!). No es fcil distinguirlos, porque las
chicas Gminis ansiosas y perdidas tienen arranques de vivacidad y optimismo... as como hay momentos en
que las vivaces y optimistas se sienten ansiosas, perdidas y solas. El hombre Gminis desorientado puede
virar repentinamente a la estabilidad... y los confiados pueden sentirse circunstancialmente inseguros.
Temo que la astrologa no tenga una respuesta definitiva. Quizs el chico y la chica Gminis enamorados
debern limitarse a olvidar la frmula de la compenetracin romntica que habla de convertirse en uno,
porque ellos siempre sern cuatro. Pero esto tambin cuadruplica sus posibilidades de ser felices. As que
llevan las de ganar si complementan sus apuestas con mucha confianza... y mucha paciencia.

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GMINIS

CNCER

Aire - Mutable - Positivo


Regido por Mercurio
Smbolo: los Gemelos
Fuerzas diurnas Masculino

Agua - Cardinal Negativo


Regido por la Luna
Smbolo: el Cangrejo
Fuerzas nocturnas Femenino

La relacin GMINIS-CNCER
Ojo, no estoy muy seguro de que tengamos un estudio, pero hacemos cuenta de que lo
tenemos, y es lo mismo. i Upal!
Se alej danzando... y todos exclamaron I-Upal! y danzaron detrs de l, buscando el
estudio, y no recuerdo si lo encontraron, pero de todas maneras encontraron rincones, y todos
ellos se acomodaron.

Se est desarrollando una fiesta. Cerca de la mesa de los canaps, cargada de lonjas de queso, de
tentempis (de la mejor calidad) y de otros manjares, se oye una voz, fuerte y clida, entrecortada por risas,
que atrae a una multitud... (una voz femenina).
... y el primer da que estuve all, resolv salir a cabalgar, por las montaas. Como no haba nadie que
pudiera verme, me quit la blusa, porque deseaba broncearme ntegramente, entendis? Ah estaba, montada
sobre ese alazn, tan desnuda como Lady Godiva de la cintura para arriba, y ya sabis que soy muy recatada.
Era fabuloso. Bueno, despus de un par de horas estaba roja como un camarn, y pens que era hora de volver
al establo donde haba alquilado el caballo. Pero cuando estir la mano para coger la blusa y ponrmela, no se
hallaba donde la haba dejado. Haba resbalado del arzn de la silla quin sabe en qu lugar del bosque. Me
imaginis volviendo a caballo, y enfrentando, semidesnuda, a todos los hombres del establo? Naturalmente,
me ech a llorar abochornada. Saba que eso era totalmente imposible. As que le dije al caballo, medio
histrica...
Al mismo tiempo, desde un lugar contiguo a otra mesa, cargada con agua mineral, zumos de fruta, y varias
botellas de vino tinto y blanco, llega otra voz, clara y chispeante, con perfecto nfasis y sincronizacin, en
tanto se congrega una segunda multitud...
... de modo que este fulano de Indiana vuelve todas las noches borracho a casa durante aos, hasta que
finalmente su esposa amenaza con abandonarlo. Como la ama realmente, se enmienda durante unos meses.
Hasta que una noche pierde el control, pilla una curda, y olvida durante tres das y tres noches dnde vive.
Despus teme volver a casa, porque es posible que ella no lo perdone. As que se exprime el cerebro. Entra en
una cabina telefnica, echa una moneda, marca el nmero de su casa, y cuando lo atiende su esposa, grita:
"Oh, Helen, cunto me alegra oir tu voz! Pens que nunca volvera a orla. Ahora escucha bien. Estoy en
Arizona y maana llegar a casa, pero pide a la polica que interfiera el telfono apenas yo corte... y si llaman
antes de que yo llegue, NO PAGUES EL
RESCATE... PORQUE ACABO DE HUIR!".
Gminis y Cncer son excelentes narradores. La capacidad del Cangrejo para recordar los detalles y para
contar una historia con refinada sensibilidad, condimentndola con la imaginacin y el humor lunares, puede
mantener en trance a una multitud. Si en la habitacin tambin hay un Gminis que urde historias

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descabelladas con ingenio y simpata, y que quizs hace como complemento algunos trucos con naipes, los
espectadores no sabrn hacia cul de las tres pistas del circo es mejor volver la vista. (Una pista para Cncer y
dos para los Gemelos. Cuando se trata de Gminis todo es por partida doble.)
Es posible que antes de que concluya la fiesta, Cncer o Gminis, o ambos, extraiga, una cmara y
empiece a sacar fotos. Gminis y Cncer comparten el amor por la fotografa con Leo y Piscis, y stos son
los cuatro signos solares con ms posibilidades de convertirse en fotgrafos profesionales, todos ellos por
distintas razones. La mayora de los mejores fotgrafos nacieron bajo uno de estos cuatro signos, o tienen la
Luna o el ascendente all... y entre ellos prcticamente monopolizan el mercado.
Otra semejanza entre el Cangrejo y los Gemelos consiste en que sus auras tienen muchos matices de color,
porque ambos son muy tornadizos. Cncer vira de los azules oscuros de la depresin al rosa del
sentimentalismo, chapotea en el marrn del mal humor o en los fangosos verde lima del miedo y la
hipocondra, y despus vuelve arrastrndose a la nostalgia teida de color lavanda y a la risa rosada.
Gminis revolotea del jbilo amarillo brillante al ndigo de la desesperacin, experimenta con los rielantes
ensueos plateados y con el oro de la esperanza, despus se zambulle en el gris del abatimiento, del cual salta
rpidamente al blanco refulgente de la fe infantil.
Cuando sus auras se mezclan, estn representados todos los colores del espectro, desde el ter transparente
hasta el ultravioleta... y unos cuantos tonos y matices adicionales que todava no han sido observados, y
menos an bautizados.
Ambos son soadores, y expertos en el arte de obtener publicidad (aunque los Cangrejo simulan que sta
no les interesa, no engaan a nadie: les encanta llamar la atencin). Ambos tambin tienen una imaginacin
vivaz, y son igualmente propensos a rer en pblico y llorar en privado. Tal vez pensis, entonces, que es
difcil distinguirlos. No lo es. Es tan fcil como distinguir a un ave que est en el aire de un cangrejo que est
en la playa. La primera vuela a merced del viento o de una brisa cambiante, agitando las alas, mirando
velozmente en una y otra direccin con sus ojos brillantes. El otro se arrastra cautelosamente a lo largo de la
costa, cerca del agua, a la luz de la luna... hacia atrs, hacia el costado, lenta y deliberadamente. Ambos
resultan a menudo divertidos. Ambos cambian de humor sin aviso previo.
Aunque a ratos sus formas de comportamiento sean parecidas, en lo que concierne a sus naturalezas
bsicas, Gminis y Cncer, como todas las otras configuraciones de signos solares 2-12, son tan distintos
como la noche y el da, tan positivos y negativos como los polos norte y sur... y, en este caso, tan diferentes
como el Aire y el Agua (que lo son, y mucho, como deberis admitir).
Los Gemelos son mutables. Por tanto, prefieren corretear de un lado a otro, de ac para all, comunicando
ideas y ensueos, en lugar de ser los mandones y de dirigir el espectculo. Los Cangrejos son cardinales, as
que no les gusta comunicar nada (y menos an sus propios secretos) y prefieren llevar la batuta... no
necesariamente en el primer plano, con una banda de msica, pero s en una franca posicin de mando.

Como lo influye la vibracin 2-12, Gminis intuye (porque Cncer es el signo situado delante de Gminis en
la rueda krmica) que l o ella tiene mucho que aprender de la cautela y la prudencia y la discrecin de los
Cangrejos: la capacidad de sentarse a esperar pacientemente, y la tenacidad necesaria para sustentar una idea
hasta que sta pase de la forma brumosa a la slida. Como Gminis es el signo situado detrs de Cncer, el
Cangrejo lleva ansiosamente, en el alma, un vago recuerdo de lo que era vivir acuciado por los mltiples
anhelos de Mercurio, explorando el mundo en busca de un lugar donde asentarse, y sin embargo con pocas
ganas de permanecer demasiado tiempo en un mismo punto, por temor a perderse algo ms excitante. Los
Cangrejos recuerdan, ah!, vaya si recuerdan... y as, regidos en esta existencia presente por la Luna
fluctuante, sienten que los consume peridicamente la fiebre de viajar, y al mismo tiempo los retiene el miedo
(emanado del mismo recuerdo interior krmico) de perder, a la manera de Gminis, lo que ya poseen. Por eso
los Cncer casi siempre permanecen junto a la lumbre del hogar, volando (normalmente) slo con la
imaginacin, bajo la Luna llena o nueva, sin correr ningn peligro durante estos vuelos imaginarios a la vera
del nido domstico. Pero los Cangrejos toleran a menudo mejor que la mayora de los otros signos solares el
desasosiego de los Gemelos, porque lo entienden.
Los Gminis no tienden a perseverar en las relaciones de amistad, negocios y amor. En todo caso, las
retienen con demasiada ligereza e informalidad, las sueltan con demasiada prisa y a veces las desechan
demasiado pronto. Cncer se aferra como si en ello le fuera la vida (exceptuando a aquellos Gemelos y

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Cangrejos cuyos signos lunares o ascendentes tienen un fuerte antagonismo con sus soles natales, e incluso en
estos casos el conflicto es slo peridico y temporal). Los Cangrejos tpicos temen que. si aflojan las pinzas,
quedarn flotando a la deriva en aguas desconocidas, despojados de los elementos que los reconfortan y les
resultan familiares.
Por supuesto, algunos Cangrejos afirmarn vehementemente que carecen de este rasgo: aquellos cuyas
cartas natales contienen una Luna o ascendente Aries. Gminis o Sagitario. Aun as, no os dejis impresionar
demasiado por sus asertos, y sobre todo por sus alegatos de que no guardan las cosas ni se aferran a ellas. Su
tenacidad es ubicua. Slo asume algunas formas sutiles en cada criatura lunar especfica. Pero si la buscis
con perseverancia, la hallaris.

Un psiquiatra Gminis, cuya consulta est en la planta baja de un edificio donde yo viv en otra poca, me
cont el caso de una paciente Cncer a la que trat una vez de una ligera neurosis. Ahora la Cangrejo est
totalmente curada, feliz y conforme. y ya no lloriquea. En la primera visita al psiquiatra puso tanto nfasis en
la nostalgia v la seguridad financiera, que el signo solar de la reservada paciente se dej entrever. Despus de
escucharla durante un par de horas, el psiquiatra Gminis, aunque fascinado, empez a inquietarse, porque ya
haca demasiado tiempo que estaba sentado en un mismo lugar, as que activ uno de sus rpidos cambios
mercuriales de tema y coment:
Apuesto que ha nacido bajo el signo de Cncer.
S, es cierto respondi la sorprendida paciente. Ha sido muy listo al descubrirlo, porque no tengo
absolutamente ninguna de las tpicas caractersticas lunares. La astrologa afirma que Cncer es perseverante
y tenaz. Yo no. No lo soy en absoluto. Y tampoco soy ni remotamente posesiva. No guardo las cosas y no me
aferro a ellas.
Bueno dijeron volublemente los Gemelos, quiz se trata de su signo lunar. Ahora concertaremos
una cita para la semana prxima.
CANGREJO: Quiere que me vaya, no es verdad? Quiere librarse de m porque lo aburro como paciente, y
piensa que estoy tan chalada que ni siquiera usted podr ayudarme. Esto es lo que me quiere insinuar.
LOS GEMELOS: No, no... claro que no. De ninguna manera. Slo se trata de que esta noche debo pronunciar
una conferencia en Chicago, y si no estoy en el aeropuerto dentro de un cuarto de hora, perder el avin.
CANGREJO: Entiendo. Y desea que me vaya. Me insina que me vaya. No es as?
LOS GEMELOS: No. Quiero decir, s. Bueno, no se trata de que desee que se vaya. Pero temo perder el
avin, eso es todo.
CANGREJO: Tal vez podra ir con usted en el taxi hasta el aeropuerto? Y si regresa maana, podra venir a
cenar a mi casa. Preparo unos spaghetti sin carne realmente sabrosos.
LOS GEMELOS: Me encantara, pero... ya he concertado otra cita para la noche de maana, cuando regrese.
CANGREJO: (sollozando) Me odia. Entiendo sus indirectas. Me ir.
LOS GEMELOS: Por favor, no llore. Se equivoca. No pretendo librarme de usted. Ojal
pudiera llevarla a Chicago conmigo. Me encanta su compaa. Se lo aseguro. CANGREJO:
(considerablemente reanimada). De veras? Est bien, entonces puedo volver pasado maana, en lugar de dejarlo para la semana prxima?
Lo ms gracioso es que ahora la paciente Cncer, la doncella lunar, est casada con el psiquiatra Gminis, y
son muy felices. Confo en que esta breve historia servir para hacerle entender al Gminis de cualquier sexo,
edad o profesin, que est asociado de alguna manera con un Cncer, que el dcil puede echarle la zancadilla
al listo, ya sea en el romance o por encima de la mesa en un juego de naipes o en una transaccin comercial,
para no hablar de lo que sucede en la carrera alrededor del crculo familiar.
Los Cangrejos son hombres, mujeres y nios impresionables y sensibles. Tienden a estar peridicamente
contrariados y mustios, cavilando sobre agravios reales o imaginarios. Pero en general los Gemelos pueden
engatusarlos con zalemas o palabras engaosas, hasta hacerlos salir nuevamente de sus caparazones. Gminis
es el trotamundos mental (o real), un peregrino solitario, desarraigado, emocionalmente (y a veces literalmente) desprovisto de hogar, que est extraviado y busca... el nio eterno. Cncer es la madre (o el padre)
eterna, protectora, clida, tierna y estimulante. No es extrao que estos dos confluyan... se separen... despus
vuelvan... despus se separen nuevamente.
El elemento Agua, cuando satura el Aire con suficiente humedad, genera un chubasco que despeja la
atmsfera de niebla, smog... y malentendidos. Por consiguiente, Cncer puede hacer que Gminis vierta esos
deseos gemelos, que derrame algunas lgrimas sinceras, y que se detenga un momento, de cuando en cuando,
para recordar las cosas que importan de veras.

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Mujer GMINIS Hombre CNCER


Crees que yo podra ser un gemelo?
Claro que no respondieron los Gemelos. Es tremendamente difcil serlo...
Realmente no tena ninguna esperanza dijo l.
El hombre Cncer vive en sus sensaciones, en sus emociones y en su imaginacin. Le encanta la historia y le
gusta leer acerca de la gloria de los tiempos pasados, desde los bizantinos hasta los medievales y el
Renacimiento. Pero tiene una actitud bastante romntica respecto del pasado (el suyo y el de otros personajes
histricos), y no le gusta que le recuerden que tal vez los Caballeros de la Mesa Redonda tenan algunos
defectos, que los caballos que montaban tenan abrojos en la cola, que usaban camisas sudadas bajo la cota de
malla (los caballeros, no los caballos), que coman con los dedos, y que posiblemente dorman con donosas
muchachas sobre la paja mugrienta.
En la imaginacin sentimental del Cangrejo, el caballero tiene modales impecables en la mesa y monta un
corcel inmaculadamente blanco, con la cola suave y cuidadosamente cepillada. Vuelve de sus grandes
cruzadas impoluto y libre de traspiracin, para reclamar el pauelo perfumado de su bella dama. No tiene
nada de malo que un Cangrejo comparta su espritu de hidalgua con una chica Gminis. Pero ella debe tener
conciencia, aunque l no la tenga, del hecho histrico en virtud del cual muchos caballeros de antao, despus
de guardarse ese pauelo perfumado bajo la armadura refulgente, buscaban dentro de su visera la llave del
cinturn de castidad de la bella y recatada dama... y a veces se equivocaban de llave.
O sea que el Cangrejo, como el caballero real o legendario, planea algo ms ntimo que guardarse un
pauelo, aunque su contacto inicial sea muy parsimonioso y corts.
La chica Gminis puede dejarse cautivar emocionalmente por la escena romntica que la galantera de l
evoca en su propia mente imaginativa. Dada su propensin a soar despierta, es fcil que ella se vea vadeando
impacientemente el foso, y corriendo despus a travs del prado cubierto de trbol, en direccin a l, con la
larga cabellera rubia (o sus trenzas negras como el plumaje del cuervo) flotando a sus espaldas. Entonces ella
hace una elegante reverencia frente a su caballero Cncer, montado en el brioso corcel. La escena es casi
autntica. Ella se sonroja, le tiende tmidamente su perfumado... cuidado! Es posible que a esta altura el
Cangrejo le haya aferrado la mano primorosa con su fuerte pinza, y que no est dispuesto a soltarla.
Cuando el espritu posesivo de Cncer se bate a duelo con el anhelo de libertad de Gminis, el
enfrentamiento puede lacerar cruelmente sus sueos. Despus de descubrir que esta chica abarca en realidad
dos mujeres una que se conforma con acurrucarse dichosamente junto a l en la torre del castillo y otra que
est resuelta a merodear por las lomas, jugando con el antlope, persiguiendo a los mastines o haciendo lo que
sea es posible que el hombre Cncer se enfurrue. Tambin es posible que la ataque con sus pinzas. O que
se recluya como un cangrejo en la tenebrosa y hmeda mazmorra, esperando que ella baje por la escalera de
piedra y lo tiente a salir nuevamente. Si ella est distrada pensando en alguna otra cosa, l deber esperar
mucho tiempo ah abajo.
Hay chicas Gminis que, llevadas por el sbito rapto de fantasa o por un capricho mental, olvidaron
responsabilidades mundanas como las que concernan a un amante encerrado en una mazmorra. No se trata de
que esta chica no tenga una excelente memoria, pero otros intereses asumen prioridad, a veces incluso sobre
el amor, hasta que se siente sola. Entonces vuelve sobre sus pasos, buscando perdn y consuelo. As que la
historia puede tener un desenlace feliz, al fin y al cabo, porque el hombre Cncer es probablemente el ms
solcito de los animales de sexo masculino. Nadie puede ser ms tierno, afable y comprensivo que un
Cangrejo, con una chica Gminis extraviada y aturdida. Ni siquiera el Toro dulce, ceudo y protector. Si
existe un aspecto luminario armonioso entre sus cartas natales, podemos dejarlos sobre los escalones de
piedra, mientras el sol se pone lentamente en el oeste, confiando astrolgicamente en su dicha perenne,
totalmente seguros de que ella siempre se echar a rodar as como de que l siempre se enfurruar, pero
tambin de que ella siempre volver y l siempre la mimar y la perdonar.
Si el aspecto Sol-Luna entre sus horscopos no es armonioso, an no podemos desentendernos de ellos.
Necesitarn un poco de ayuda para evitar que caigan en el foso y se ahoguen... o que desaparezcan tras los
cerros, en diferentes direcciones, montando caballos distintos.

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Podrn encontrar su cuota de felicidad, pero ella deber tener paciencia y l deber ser un poco dctil. No
ser fcil, porque el planeta regente de ella, Mercurio, no irradia vibraciones pacientes. Y la luminaria regente
de l, la Luna, cambia con tanta frecuencia que es imposible contar con la larga duracin de una de las fases.
l tendr un acceso de temerario desenfreno que se complementar con el de ella, y despus volver a su duro
caparazn antes de que ella tenga siquiera tiempo de disfrutarlo. Se necesita prctica y devocin por ambas
partes. Aunque los estados de nimo cambiantes que tienen en comn tal vez no sean su nico problema,
constituirn la base de todos los otros. Cuando se toma a una chica Gminis y un hombre Cncer ambos
sujetos a sbitos cambios de humor y se los pone en estrecho contacto, nadie sabe muy bien cul de ellos
tiene la culpa de lo que sea en un momento dado.
Ah est l, eufrico y alegre y risueo, pero ella acaba de entrar en una etapa lgubre y contemplativa.
As que ella hace un carioso esfuerzo para ponerse a la par de su hilaridad. Sin embargo, cuando ella termina
de cambiar de velocidad y de pasar a directa, l ya ha desconectado el programa cmico. Ahora, l obedece la
llamada de la Luna creciente que lo induce magnticamente a mostrarse taciturno e introvertido. As que l
hace un esfuerzo igualmente carioso para ponerse a la par del flamante regocijo de ella. Slo que, cuando l
se ha sincronizado con la Luna llena y se ha convertido en un Pjaro Loco desbordante de risa, Mercurio la ha
atormentado a ella y la ha crispado en un nudo mental de sarcasmo y crticas mordaces a sus chistes. Esto
hiere profundamente los sentimientos del Cangrejo. As que ella realiza otro esfuerzo carioso para... bueno,
esto podra seguir y seguir, hasta producirles un colapso nervioso recproco. Tendrn que tocar el silbato,
detenerse, y pasar revista al programa de sus cambios de talante. Hay varias soluciones.
Ambos pueden volver al punto de partida (digamos, a un da en que sus planetas funcionan al mismo ritmo) y
tratar de armonizar all sus cambios de humor. Este es un sistema. Rer juntos, llorar juntos, enjugarse las
lgrimas juntos, esperar juntos... y luchar juntos. Si no pueden proceder as, porque sus estrellas irradian en
distintas longitudes de onda, por lo menos pueden dejar de reprimir sus intenciones encontradas y formularse
esta promesa a s mismos: Si l est eufrico mientras ella est abatida, l la animar en lugar de permitir que
ella lo deprima; si ella est sosegada mientras l est exasperado, ella lo apaciguar en lugar de hostigarlo e
incitarlo a encerrarse aun ms en su caparazn. Cuando Gminis est contenta, por qu habr de dejarse
desmoralizar por la hosquedad del Cangrejo? l necesita comprensin y no un fro rechazo. Cuando Cncer
est de buen humor, por qu habr de permitir que la excitabilidad de ella lo ofusque y lo haga replegar? Ella
necesita que la mimen y no que le pongan mala cara. Si cumplen esta promesa, podrn educar gradualmente
sus caracteres para que estos se deslicen por los mismos carriles, aunque igualmente tendrn algunos impasses
peridicos.
Como sta es una configuracin de signos solares 2-12, generalmente la mitad Cncer de la pareja tolerar los
defectos de desasosiego y desapego de los gemelos Gminis... y la mitad Gminis probablemente tratar de
imitar las virtudes del Cangrejo, o sea la paciencia y la sensibilidad, pues intuir que necesita aprenderlas. Sin
embargo, es posible que ella se resista a aprender de l a ser ms cauta con el dinero. A menos que tenga un
signo lunar o ascendente ms conservador, es posible que la Gminis piense que el Cncer es una tacaa
combinacin del avaro de Molire y el Shylock de Shakespeare. La mayora de los Gminis esparcen el
dinero como si ste fuera alpiste. La mayora de los Cncer acaparan como Midas. Entre uno y otro extremo
existe un trmino medio para que concierten un acuerdo financiero. Pero este trmino medio no lo
encontrarn ni en la mezquindad de l ni en el despilfarro de ella. La tendencia del Cangrejo a cicatear el
dinero nace de su temor a pasar hambre algn da y de su necesidad de sentirse seguro.
Cuanto ms satisfecho est el apetito de afecto de l, tanto menor ser su miedo de pasar hambre. Si l
tiene suficiente seguridad emocional, no necesitar tanta seguridad financiera. En cuanto a los bienes
materiales que al Cangrejo le gusta acumular, es posible que Gminis tema que esos mismos bienes la aten a
un lugar. Su tendencia a deshacerse del dinero proviene de la idea de que le resultar ms emocionante
gastarlo que economizarlo. Cuando disfrute de suficiente libertad emocional y estmulo mental, no se sentir
obligada a comprar con dinero estas necesidades bsicas de Mercurio, y ser menos derrochadora. Gminis es
gregaria y debe estar activa en el plano mental o en el fsico, y preferentemente en ambos. A ella le gusta
comer a menudo fuera, por dos motivos: no es particularmente aficionada a cocinar, y necesita cambiar con
frecuencia de escena. Es posible que el Cangrejo prefiera comer en casa, porque esto le trae reminiscencias de
las comodidades de su infancia... o comer en casa de su madre, que le trae an ms reminiscencias de las
comodidades de su infancia. Dicha modalidad puede generar algunas tortuosidades en la relacin CncerGminis, a menos que las dos partes las allanen Mediante la adopcin preventiva de algunas lneas de

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conducta muy claras.


Puesto que ambos viven en un inundo de fantasa y ensueos, su relacin sexual puede ser estimulante para
ella y satisfactoria para l. l suministra la sensibilidad sensual y el afecto... y ella aporta la imaginacin y la
variedad. La chica Gminis tiene ocurrencias sbitas. Es posible que sustente algunas ideas cambiantes acerca
de la pasin. Pero el Cangrejo es suficientemente sensible como para acomodar sus propios deseos a los de
ella, y probablemente concebir algunas ideas romnticas de su propia cosecha, alejadas del hasto rutinario.
Raramente sus actos amorosos sern repetitivos. Variarn con las fases de la Luna, a medida que ellos
respondan al flujo y reflujo de sus emociones. Ella observar un elemento clido y protector en la forma en
que l encara la unin sexual, y su corazn de nia perdida encontrar solaz cuando l la rodee con sus
brazos. l notar que siempre hay un elemento inefablemente delicado y tierno en la forma en que ella busca
su afecto.
A menudo, el hombre Cncer respeta tanto a la dama Gminis amada que parece no poder entregarse
con ella a la pasin total, como si creyera que es tan frgil como una flor y que podra lastimarla. Pero ella no
es tan frgil como cree l, a pesar de sus modales delicados y afables y de su tacto etreo y ligero. Ella
necesita, busca v desea... que la traten como a una mujer adulta, y no como a una criatura encantadora.
Cuando ella est junto a l, en la oscuridad, lo asir con fuerza, y sus temores se disiparn. A muchas chicas
Gminis les disgusta dormir en la oscuridad total... pero es posible que en compaa de este hombre est
dispuesta a intentarlo.
A muchos hombres Cncer tambin les disgusta dormir sin una lmpara de noche encendida. Pero
cuando la tenga a ella muy cerca, la oscuridad le parecer una amiga. Las pesadillas que lo z tormentan tan a
menudo parecern muy remotas cuando puede sentir la cabeza de ella sobre su hombro. Su cabeza
inquieta... pero estar ms tranquila, ms sosegada, ms en paz con l, consigo misma y con el mundo...
despus de que ambos hayan experimentado juntos la unidad fsica. Lo estar, y visiblemente. A veces,
durante das y das. Hasta que vuelva a llamarla su gemela, y adopte esa expresin lejana. Ser entonces
cuando l deber sujetarla, antes de que se aleje flotando.
El Cangrejo macho, con su sonrisa tmida, disfruta de las fiestas y de la gente, de la msica y del baile,
aunque se resiste a confesarlo. sta es la mujer ideal para azuzarlo y engatusarlo y tentarlo hasta hacerlo
renunciar a su papel de ermitao misntropo y hacerlo salir a la luz rutilante. Es posible que lo induzca a ir a
bailar, salir de camping, a practicar equitacin, a navegar... a esquiar a campo traviesa, o a recorrer Europa
con ella, visitando ruinas antiguas, tratando de recordar la poca en que quiz vivieron en una civilizacin
extinguida... y en que quizs intercambiaron un brindis con esa misma copa.... y acaso ella luci el collar
exhibido en una vitrina del Museo Britnico cuando se amaban vehementemente en Egipto?
La chica Gminis puede persuadir al Cangrejo para que haga prcticamente cualquier cosa, pero lo que le
resultar ms fcil ser seducirlo para que viaje. Lugares tales como las ruinas antiguas y los viejos museos
lo magnetizan secretamente. l vive en el ayer, y quiz su sueo ms entraable, del que anhela no despertar
nunca, consiste en volver a visitar ese ayer en compaa de ella. Y con ella, es posible que no despierte.
Gminis vive en el viento, donde los sueos son realidad... donde la realidad misma es un sueo.
Probablemente l aprender esto, cualquiera que sea el lugar adonde vayan juntos. Casi siempre, ella se le
adelantar, con la cabellera flotando en la brisa, sin siquiera mirar por encima del hombro para verificar si l
an la sigue. No necesita mirar atrs. Sabe que l todava est all. Sabe que el amor de l es estable, que su
devocin es inconmovible, y esto es lo que ella ha buscado durante toda su vida: un par de ojos que digan
Ven a casa. l ha buscado un par de ojos que digan Corramos por las estrellas!.
Y as es como cada uno de ellos ve el deseo tcito reflejado en los ojos del otro, desde la primera vez que se
contemplan, a travs de una calle atestada... o de una habitacin... y sus miradas se acoplan inextricable,
inesperadamente. Durante aos y aos conversarn acerca de aquella noche y evocarn juntos las lgrimas
que ambos sintieron brotar sbita, inexplicablemente, cuando sus miradas se encontraron por primera vez...
sin que ellos supiesen siquiera sus respectivos nombres. Pero eso no importaba. Se llamaron silenciosamente, a travs de un aire musical semiolvidado, por los nombres secretos que conocan sus corazones.

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Una vez que se hayan declarado su amor, es posible que ella le prodigue un plateado, torrente de
obsequios, y al principio la naturaleza cauta de l quedar azorada frente a:- tan impulsiva prodigalidad. Sin
embargo, cuando ella no mire, los ojos de este hombre se llenarn de lgrimas lunares de puro deleite, al
sentirse tan amado y venerado. Tmida, pero orgullosamente, exhibir a sus amigos los regalos de ella. Es
que, veris, sta es la prueba de que lo aman, cosa que ella capta con su intuicin instantnea, centelleante
Ella anhela compensarle todas las veces que qued decepcionado, cuando nio, en la maana de Reyes.
Cmo lo sabe? l nunca se lo dijo. Lo sabe, simplemente. Porque lo ama. As de extrao es el amor. Es
posible que, al cabo de un tiempo, ella produzca una transformacin mgica en la personalidad del hombre
Cncer. Entonces l se relajar, y tambin ceir algunas sorpresas especiales para ella con lazos de color azul
intenso y plateado, o violeta y amarillo solar. Cuando un Cangrejo se siente confortablemente amado, el
afecto recproco es ilimitado, insondable, mil veces mayor... y l llorar, de pura felicidad, sin ninguna
vergenza.
l siempre la tratar como a una dama. A ella la emocionar tan delicioso remedo de pocas ms corteses
y generalmente se comportar en consecuencia. Para ella, l es un caballero, un caballero galante, que la
conmueve con ocasionales vislumbres del nio que lleva dentro. Entonces la que llorar ser ella, porque l es
muy vulnerable al agravio, a pesar de su duro caparazn exterior de impasibilidad. Porque l es un poeta, y
ella ha sido la primera en adivinarlo. Los Gminis son grandes adivinos y siempre ganan los caramelos
ofrecidos como recompensa.
La chica-mujer Gminis es realista, no obstante sus cambios de mscaras: primeramente caprichosa,
despus cnica, siempre fascinante para el Cncer, cuyas expresiones faciales a ella tambin le encanta
observar, porque reflejan los diversos colores y tonos de sus propias emociones lunares: jbilo o tristeza,
tranquilidad o preocupacin.
Cualquiera que sea la edad cronolgica del ave femenina de Mercurio, sta es siempre juvenil y anhelante,
reflexiva y tierna... su tez y sus ojos tienen la transparencia cristalina de los de una nia... plena de
ensoaciones brumosas, pero implacablemente estimulada por la lgica. Algunos de sus sueos los pierde
negligentemente por el camino, otros los olvida, en medio del chisporroteo de una nueva excitacin. Los
profundos y sagrados los conserva encerrados dentro de s. Un hombre Cncer tenaz puede instarla a
compartirlos con l, si se da prisa, antes de que ella se aleje girando.
Pero es posible que l necesite un tiempo para asegurarse, y los Cangrejos pueden prolongar
excesivamente la espera. Un da ella estar parloteando y fascinndolo, y de pronto lo notar muy callado.
Qu sucede, querido? He dicho alguna inconveniencia? preguntar, vagamente turbada.
No. Slo se trata de que... pienso que podra amarte. Pero no estoy seguro.
Ella no entender a qu se refiere. Desde el punto de vista de Gminis, en la vida no puede estar seguro de
nada, sobre todo cuando se trata del amor. No hasta que llegas al final del camino. Ya falta muy poco tiempo
para ese momento. Por qu derrocharlo, entonces?

Hombre GMINIS Mujer CNCER


l ces de mirarla, pero ella ni siquiera entonces lo solt. l retoz e hizo muecas, pero
cuando termin fue como si la tuviera dentro de l, golpeando.
Normalmente, el hombre Gminis est en condiciones de analizar a las personas deprisa,
con una clarividencia rpida y segura. Normalmente, la doncella lunar tiene una aguda sensibilidad para
captar la naturaleza humana. Juntos (lo mismo que Acuario y Piscis) forman una excelente pareja de
investigadores, y no es casual que a casi todos los Gminis y Cncer les gusten las historias de detectives.
(Tambin a los Escorpin, aunque stos son ms aficionados a las historias de asesinatos y de fantasmas.)
Sin embargo, a pesar de que l es muy espabilado y disfruta de una gran agilidad mental, y a pesar de que
ella es experta en sonsacar secretos a los dems, el enigma que Gminis y Cncer no parecen saber resolver es

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el que se plantean recprocamente. Siempre falta algo. Preguntadle a un hombre Gminis qu es lo que ms lo
turba en la chica Cncer que ama, y os contestar:
Nunca s qu es lo que piensa.
Preguntadle a una chica Cncer qu es lo que ms la turba en el hombre Gminis que ama, y os contestar:
No s qu es lo que desea.
As son las cosas entre estos dos enamorados cuando se conocen, y as sern cuando se separen, amigos o
enfadados cualquiera que sea la forma de separacin terrenal y as sern siempre, si siguen conviviendo.
La discrecin de ella, su forma de replegarse sobre s misma y de negarse a hablar cuando est dolorida,
pondrn frentico al hombre Gminis, aunque no es normal que esto les ocurra a los despreocupados
Gemelos. De cuando en cuando ella le dir lo que piensa, pero con la misma frecuencia cerrar con un
chasquido su caparazn de Cangrejo ante sus preguntas, y lo dejar frustrado y con una sensacin de total
incapacidad para rescatarla de una melancola en la que l no sabe ni remotamente cmo se sumi. Ser intil
que la hostigue con acusaciones y sarcasmos. Ella permanecer encerrada en su caparazn hasta que est
dispuesta a volver a salir, y entonces alegar que no recuerda qu fue lo que la puso taciturna y de mal humor.
En realidad s lo recuerda. Pero se siente ms segura cuando retiene sus secretos. A veces la chica Cangrejo se
echa a llorar, y desahoga sus aprensiones, pero ni siquiera entonces l podr descubrir la razn concreta y
ltima de su angustia. No hay por qus y por tantos. Gminis no se queda conforme hasta que desenreda todas
las maraas y hasta que explora todos los motivos, y en consecuencia la conducta crptica de ella le deja una
sensacin constante de vaga inquietud. Cmo podr resolver el misterio de las melancolas de ella si guarda
las claves en su buhardilla, ocultas dentro de sus bales de chistes y arrebujadas bajo los ngulos de sus
temores silenciosos? Quizs es precisamente porque no puede resolverlo, que l retorna a menudo, una y otra
vez, para repetir el intento. Pero posiblemente nunca sabr qu es lo que ella piensa realmente entre sus
sollozos, sus risitas y su serenidad. Slo captar vislumbres y pantallazos cuando ella le permita colarse en la
buhardilla de su corazn para ayudarla a buscar un viejo recuerdo que extravi hace mucho tiempo, en su
infancia.
Ella, por su parte, le dara la Luna si pudiera. La chica Cncer enamorada slo desea venerar, proteger y
suministrar afecto a su hombre (aunque es posible que las cuotas de devocin que le corresponden a l se
reduzcan bruscamente a la mitad cuando sus hijos entren gateando en el corazn de ella). Lo atiborrar de
comida, le prodigar comprensin, y lo distraer con su extravagante humor lunar. Pero cmo podr guisar
ella un ensueo completo capaz de satisfacer todo el apetito del Gminis, si ste modifica constantemente la
receta que lo hace feliz? La evasividad con que l cambia de tema, precisamente cuando ella cree haber
comprendido lo que su hombre anhela, la hace prorrumpir en llanto y pataletas. Tal vez la chica Cncer no
descubra nunca qu es lo que l desea realmente, porque l no lo sabe, y aunque lo supiera, slo lo
compartira con su personalidad gemela.
No se trata de que el Gminis no confe en ella. Pero slo su Gemelo puede descifrar las
complicaciones de sus sueos mercuriales y puede traducirlas en un objetivo nico. Como la doncella lunar es
muy reflexiva y tiene una gran sensibilidad emocional, es posible que absorba parte de la estrategia de l por
su sola proximidad. Sabr todo lo que concierne a los trucos mentales del Gminis... todo, menos la forma de
ejecutarlos. Esto se debe a que se hallan engranados en velocidades distintas. La de ella reza: lentamente y
con cautela, a pesar de su apariencia exterior de movimiento ajetreado. La de l reza: veloz y temerariamente,
a pesar de que se trata de uno de esos Gminis que ostentan una fachada fra y serena. Su mente se activa con
combustible para reactores y est siempre lista para el despegue instantneo.

sta es una configuracin de signos solares 2-12: Gminis es el signo situado detrs de Cncer y Cncer es el
signo situado inmediatamente por delante de Gminis. As que ella entender en secreto la naturaleza inquieta
de l, merced a un inconsciente recuerdo espiritual de lo que era ser despreocupada e informal y estar libre de
vnculos emocionales slidos. En verdad, es posible que este recuerdo la acose hasta el punto de convertirla
en el polo opuesto, y que la haga aferrarse con desesperacin a la seguridad, preferentemente emocional y, si
sta falla, financiera. Gminis comprender semiconscientemente que ella puede ensearle una filosofa de la
vida que l nunca ha experimentado, y como es un buen alumno, aprender mucho en compaa de la chica
Cncer. Pero no sin algunos dolores de crecimiento.
El Gminis tpico no conserva nada que ya no necesite, desde resguardos de entradas y hojitas de afeitar
embotadas hasta relaciones humanas que han sobrevivido a su utilidad. No entiende la necesidad que
experimenta ella de aferrarse a las cosas. Cualquiera pensara que pas por los horrores de una gran

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hambruna, a juzgar por la forma en que guarda los cupones que se canjean por sopas naturales y en que
almacena vveres envasados suficientes para alimentar a toda la familia durante meses si nos sitiaran los
invasores del espacio.
Lo que l no entiende es que, cuando se trata de una chica Cncer, siempre es posible que estalle una
guerra interplanetaria. Cualquier cosa es posible, y ella quiere estar preparada. El dinero arrugado que atesora
bajo los muelles del colchn apacigua su temor a padecer el efecto de las goteras en un futuro da lluvioso.
Pero los antiguos vestidos de fiesta que guard con naftalina estn nuevamente de moda, y si les quita la
mitad superior tendr un nuevo guardarropas de faldas de gala sin gastar ni uno de esos billetes arrugados.
Tampoco tiene tanta prisa como l por deshacerse de las viejas amistades o relaciones.
La actitud ms informal de Gminis respecto de las relaciones humanas desconcierta a la chica Cncer. Lo
que le interesa a ella no es la utilidad de una relacin ntima, sino la familiaridad, la agradable sensacin que
le trae del pasado, del ayer, cuando el mundo era joven y alegre y seguro. Ella reacciona igual ante esa
relacin ms profunda que se llama amor. El amor de la chica lunar no descansa sobre la razn o la lgica. Es
impotente para destruirlo. Otros amores se pueden ahuyentar mediante el deseo, la voluntad o la clera. Se
pueden neutralizar con palabras o arrojar por la borda. El de ella debe desgastarse, y es posible que para ello
se necesiten muchos aos. Incluso entonces, ella remendar los tramos desgastados y procurar hacerlo durar.
sta es una de las lecciones ms valiosas que el corazn de ella puede dictarle a la mente de l.
Tal vez conozcis a una chica Cncer voluble y promiscua, pero no lo creis. Es una pose. Bajo su duro
caparazn de cangrejo se oculta un viejo amor desvado, zurcido con ternura y plegado con cuidado, y ella
anhela ansiosamente que vuelva a estar de moda... que sea nuevamente necesario. La imagen literaria de la
prostituta sentimental con un corazn de oro, que mima o trata como una madre a sus clientes. es el
retrato de la doncella lunar hechizada, que sigue esperando, a su modo, el regreso de l.
Para el Gminis que disfruta de unas vacaciones romnticas, siempre es hora de seguir viaje, y cargar
con el recuerdo de antiguos amores dificulta la marcha. Pocas veces lleva rescoldos en su maleta. Su equipaje
es liviano. No est atado a ningn lugar ni a persona alguna. Ni siquiera a sus parientes. Sabe que sto lo
quieren, pero igualmente se siente, de alguna manera, distante, no slo de ellos sino del mundo, hasta que
encuentra a una mujer que sabe aferrarse a su corazn. Aferrarse es una especialidad de Cncer, pero su
comportamiento posesivo, tpico del Cangrejo, lo desalentar, y lo alejar, a menos que ella lo disfrace de
tierna tolerancia y le confiera la elasticidad necesaria para que l pueda vagabundear. Entonces lo tentar y lo
reconfortar cuando sienta que tiene fro y est solo. Si ella aprende a aflojar las riendas, y a dejar que el amor
sea el nico vnculo que los ata, descubrir que, cuando se trata de este hombre, la palabra libre puede ser
sinnimo de fiel.
En sus relaciones sexuales, pondrn menos nfasis en la pura sensacin fsica que en las pasiones de la mente
y en una especie de erotismo emocional. La ternura afectuosa y la imaginacin vvida de ella equilibran el
tacto delicado y la sensible naturaleza sexual de l. Cuando expresen su amor en un plano fsico, incluso es
posible que descubran la pieza faltante que siempre buscan en su rompecabezas recproco, y que ste se
complete... fugazmente. Como ella necesita pruebas constantes y tangibles de que la necesitan realmente, es
posible que a veces los abrazos etreos de l la hagan experimentar deseos de que la estruje con ms fuerza,
y durante ms tiempo, para poder sentirse segura. Tal vez experimenten con frecuencia la satisfaccin sexual
ideal durante la Luna llena, cuando ella parece dotada de un poder extrao y magntico para penetrar
apaciblemente en los recovecos secretos del corazn Gemelo de l, y para arrancarlo de sus sueos y
devolverlo al ntimo misterio de su unin... que es el ms profundo de todos los sueos.
Si ella intenta trasferirle sus temores financieros, a l lo irritar su intrnseca veta econmica. Entonces ella le
preguntar: Acaso sabes lo que implica ser pobre? Es una pesadilla. Ya lo descubrirs si continas
despilfarrando tu dinero sin ahorrar jams un centavo. Nunca nadie te explic que el derroche es la antesala
de la pobreza?. Pero Gminis se limitar a encogerse de hombros y contestar, como el arquetpico
geminiano Mike Todd: No s nada de eso. He estado en bancarrota pero nunca he sido pobre. La bancarrota
es pasajera. La pobreza es un estado de nimo.
La doncella lunar entender mejor a este hombre si se da cuenta de que, cualquiera que sea la imagen
que le presenta al mundo, desde su propio punto de vista es un chico eternamente joven que, merced a un
truco mgico, ha conseguido pilotar un avin hasta grandes alturas. De vez en cuando se distrae con sbitos

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picados y cadas en barrena, fascinado por el hallazgo de una nube ms bonita, por el descubrimiento de un
amanecer o una puesta de sol ms bellos... siempre excitado por la idea de que el gran Universo y sus galaxias
refulgentes se extienden ante l tentadoramente vrgenes... convocndolo. Si ella lo ama realmente y desea
conservarlo, se mostrar jubilosamente dispuesta a liar el petate y a seguir viaje cuando el espritu libre del
Gminis se impacienta, y a convertir cada nueva parada, por muy transitoria que sea, en un santuario clido,
acogedor y grato, como slo sabe hacerlo una mujer Cncer. Esta mujer se las ingenia de alguna manera para
conferirle a todo nuevo lugar de residencia el aspecto de un jardn, poblado por las flores fragantes de la
tradicin. Y esto es precisamente lo que necesita el Gminis: poder deambular, pero sin abandonar nunca el
hogar. Poco a poco, ella se implantar tiernamente en los anhelos de l, hasta que al fin.... cualquier lugar
donde l oiga su maravillosa risa lunar se convertir en el hogar.
Es posible que el hombre Gminis se distraiga en el cielo despus del crepsculo hasta que asome la
Luna. Si se queda un poco ms, tal vez desvele el misterio de su mujer Cncer. Y no resultara gracioso que
el secreto de ella consista en que, en un mundo cambiante de verdades cambiantes, fugazmente vislumbradas
y ocultas luego por las nubes del tiempo que pasa, cada alma debe buscar su otra mitad, para saber, para ver,
para ser? El mismo secreto Gemelo de l.

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GMINIS

LEO

Aire - Mutable - Positivo


Regido por Mercurio
Smbolo: los Gemelos
Fuerzas diurnas Masculino

Fuego Fijo Positivo


Regido por el Sol
Smbolos: el Len y el Gatito Tmido
Fuerzas diurnas Masculino

La relacin GMINIS-LEO
Atrs, gemelos...

Mientras Gminis estudia las brillantes pero a veces insoportables extravagancias del Len, los Gemelos se
preguntan: El gran gato est realmente tan seguro de s mismo? O acaso Leo slo intenta demostrar que la
realidad es tan infalible y valerosa como la imagen?. Una tpica alucinacin geminiana.
Mientras el Len (o la Leona) estudia perezosamente a los mercuriales Gemelos geminianos, l (o ella)
alimenta un pensamiento parecido: Toda esta actividad mental y fsica debe de ser una forma de
compensacin. La sola supervivencia no basta para justificar tantas maniobras innecesarias. Acaso Gminis
intenta abarcar el este, el oeste, el norte y el sur, simultneamente, para ocultar el hecho de que est
extraviado (o extraviada) en el bosque con una brjula averiada?.
Ambos' han adivinado la verdad respecto del otro. S, los Leo intentan demostrarse a s mismos y al resto
del mundo, mediante un despliegue de baladronadas arrogantes, que los Leones y Leonas son tan valerosos
por dentro como parecen serlo por fuera. Y s. Gminis procura demostrarle a la personalidad gemela y a
todos los dems que corre rectamente, en la direccin justa, y que lo que hace en realidad no es dar vueltas en
redondo.
Como estos dos signos solares estn en posicin sextil, y generan entre ellos una vibracin 3-11, son
intuitivos el uno respecto del otro, son propensos a la amistad no obstante las diferencias que surgen entre
ellos de cuando en cuando, y comparten el talento de silbar en la oscuridad para fingirse valientes. Cuando
silban juntos, armnicamente, les resulta ms fcil convencerse de que todo est en orden. A diferencia de los
Escorpin (exceptuando los Lagartos Grises), que estn profunda e inconmoviblemente convencidos de su
superioridad, el Len y la Leona creen que si rugen con suficiente fuerza nadie sospechar que su miedo
interior de no estar completamente a la altura de todas las circunstancias que puedan presentarse los hace
temblar de aprensin. El rey y la reina que son el orgullo de la jungla o de cualquier reino, aula, oficina u
hogar nunca deben desprestigiarse delante de sus sbditos embelesados, que respetan y veneran la
monarqua, slo porque sus gobernantes son capaces de abordar cualquier emergencia grande o pequea con
majestuosidad sutileza y con solemnidad y sabidura regias. La quintaesencia de la realeza consiste en
proyectar la nobleza de espritu y la fuerza de carcter a las masas ms dbiles. Curiosamente, y hasta cierto
punto prodigiosamente, al simular todas estas virtudes Leo las adquiere de veras, y redescubre a travs de
todas las crisis humanas (para su sorpresa y deleite secretos) que el coraje del Len es realmente tan
portentoso y tremendo como lo sugiere su rugido.
Los Gminis tienen una buena suerte anloga con su aparente autoengao. Mientras los Gemelos venden a
los dems la validez de sus propios sueos, se la venden simultneamente a s mismos. Gminis narra
historias condimentadas con emocin, siempre divertidas, algunas de ellas con un final de doble cambio al
estilo O'Henry, que inyectan entusiasmo y estimulan a las almas ms cautas y prcticas. Con el pincel de la
imaginacin, Gminis pinta maravillosos cuadros semnticos de cosas triviales y se las ingenia de alguna

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manera para hacer que les parezcan autnticos y lgicos a las personas cuerdas, y a s mismos. Merced a esta
conviccin, los ensueos de Mercurio terminan por materializarse y manifestarse.
Como Leo intuye ntimamente que los Gminis dicen la verdad tal como ellos la ven, el enorme corazn
del Len sale al encuentro de los Gemelos, en los cuales reconoce comprensivamente a un hermano, o
hermana, de alma. Por supuesto. Leo entiende. Es como la cancin de The King and 1: Haz creer que eres
valiente y la treta te llevar lejos. Puedes ser tan valiente como haces creer que lo eres!.
Lo que lastima y desconcierta a las aves mercurianas de Gminis es la forma en que otros, menos
comprensivos que Leo, interpretan su talento para forjar imgenes. No entiende por qu cuando otras personas
hacen eso mismo, las llaman creativas e imaginativas: traficantes astutos u hombres de negocios sagaces.
Cuando lo hacen los Gminis, los consideran embaucadores y embusteros, o, en el mejor de los casos,
engaosamente diestros y rpidos en la manipulacin de los hechos. Los Gminis creen haber analizado hasta
los mnimos matices del mundo y de todos los que lo habitan. Lo creen, esto es, hasta que tropiezan con las
excepciones a la regla y finalmente llegan a la conclusin de que tal vez el mundo est compuesto nicamente
por excepciones. Lgico. Los mismos Gemelos son una de ellas.
Desde su infancia, los Gminis han tenido clara conciencia de que la ilusin es la ms fiable de las
riquezas. Ningn escenario de Broadway est tan lleno de dramatismo y pintoresquismo como el teatro de la
mente. Y por tanto, los Gemelos se sitan en todos los papeles, y son desde caractersticos hasta ingenuos,
desde estrellas hasta humildsimas comparsas, y a veces asumen las funciones de los tramoyistas y los
msicos. Por qu no? Tambin han decidido que son los productores y directores, as que pueden ser lo que
se les antoje.
Sin embargo, cuando salen a escena con los grandes gatos, lo mejor que pueden hacer los Gemelos es
cuidarse de arrebatar los ttulos privilegiados de estrella, director o productor. Si se est desarrollando un
espectculo, en cualquier lugar o momento, ya sea real o ficticio, podis apostar los afeites y las candilejas a
que los Leo insistirn en dirigirlo y producirlo... y ciertamente en desempear el papel estelar. Nadie eclipsa
con xito a un Len o una Leona, por mucho tiempo, y ni hablemos de descollar sobre un rey o una reina.
Esto no preocupa a los Gminis etreos y desapegados. En verdad, los Gemelos tienen mucho ms inters
en cambiar el decorado que en acaparar los bis. Valoran los comentarios periodsticos tanto como Leo, y son
igualmente expertos, si no ms, en el arte de conseguir que se hable o se escriba acerca de ellos. Pero si se
trata de tpicas aves de Mercurio, lo normal ser que se desplacen elegantemente a un lado y que dejen que los
Leo ms vanidosos disfruten de la mayor parte de las reverencias ante el pblico.
Ello se debe a que Gminis es un signo mutable? No necesariamente. Los Gemelos tienen otro mtodo
para su locura. Cuando estis en primer plano, encabezando el elenco, sois vulnerables a la inspeccin de un
atajo de extraos curiosos. Muchos Gminis que trabajan en el mundo del espectculo se sienten incmodos
cuando no pueden usar la capa multicolor de la identidad polifactica, que es tan til para disfrazar una
personalidad melliza o incluso trilliza que simula ser un solo ente.
Se ha dicho que dentro de cada gordo hay un mellizo flaco, que anhela escapar. Esto vale sobre todo para
los Gminis rechonchos, que han aumentado de peso en razn de un esfuerzo inconsciente por ocultar sus
personalidades secretas, por dejar de correr tan deprisa, pues lo que los aburri y los indujo a comer fue la
falta de oportunidades para la actividad fsica y el estmulo intelectual, o una culpa y una frustracin ocultas
relacionadas con sus emociones embrolladas. Sin embargo, hay pocos Gminis rollizos, porque normalmente
el Gemelo esbelto es el ms perseverante, pues tiene conciencia de que la aptitud para pasear un cuerpo
delgado, y por tanto menos visible, es un medio ms eficaz para disfrazarse. sta es la verdadera razn por la
cual los escasos pjaros de Mercurio gordos son mucho ms desgraciados que las personas de cualquier otro
signo solr (excepto Escorpin y Piscis) que han aumentado de peso. No les molesta demasiado el lastre de los
kilos de ms, y no se preocupan exageradamente por su salud. Se trata sencillamente de que as son muy
visibles, lo cual les echa a perder tanto la diversin como los juegos.
La diferencia entre la naturaleza de Gminis y la de Leo respecto de la visibilidad y la exhibicin pblica
qued demostrada de una manera bastante ejemplar cuando pronunci una disertacin en Washington, D. C.,
en mayo de 1971, ante una multitud, compuesta primordialmente por periodistas, durante un banquete de
homenaje a Martha Mitchell, la esposa del procurador general durante la administracin Nixon (que
innegablemente les haba suministrado material para algunos de sus artculos ms jugosos).
Cuando pregunt cuntos Leo haba en el saln, un montn de manos se alzaron instantneamente por todas
partes... y permanecieron levantadas, a la mayor altura posible, en muchos casos agitndose frenticamente
para no pasar inadvertidas. Cuando ped a continuacin que los grandes gatos tuvieran la gentileza de ponerse

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en pie para que los viramos, las cabezas empezaron a girar, a izquierda y derecha, a medida que todos los
Leones y Leonas que estaban presentes esa noche en el saln de baile del Hotel Shoreham se levantaban
majestuosamente. Entonces, mientras el pblico aplauda estruendosamente, todos esos Leo, empezaron
inmediatamente a hacer reverencias muy formales, aceptando cortsmente el merecido homenaje, como si as
lo estipulara el libreto. Incluso los Leones que eran gatitos tmidos, y que por fin encontraban la oportunidad
de subir al escenario y saludar repetidamente. El espectculo fue en verdad hilarante, tanto desde el punto de
vista astrolgico como desde todos los dems. Mi grabacin magnetofnica del episodio demuestra que los
otros signos solares all presentes se rieron a carcajadas durante tres minutos justos, lapso en el cual los
aplausos aumentaron de volumen a medida que los grandes gatos repetan sus reverencias.
A manera de prueba, poco despus de que se hubiera acallado el tumulto, ped que todos los Gminis
presentes alzaran sus manos. Vamos los urg, quiero ver cuntos Gemelos hay aqu esta noche. No se
levant ni una mano en todo el inmenso saln. Un murmullo circul rpidamente por el auditorio, mientras
todos se preguntaban por qu los Gminis no contestaban al pase de lista astrolgico, especialmente porque
yo acababa de sealar que, desde el punto de vista estadstico, en varios pases, incluidos los Estados Unidos,
se producen ms nacimientos en junio que en cualquier otro mes. Obviamente, por una razn de porcentaje,
debera haber habido por lo menos un Gminis entre semejante multitud.
El pblico no entenda lo que pasaba, pero yo s. Cualquier astrlogo lo habra comprendido. Los Gemelos
prefieren observar, sin identificarse especficamente. Casi nunca los Gminis desean que los reconozca una
muchedumbre. Adems, era indudable que algunos de ellos haban concurrido al banquete despus de decirle
a un amigo, consorte o pariente que iran a otra parte. A continuacin haban cambiado de idea, y no queran
que los presentes comentaran posteriormente que los haban visto all porque se haban exhibido ante toda la
concurrencia. Los restantes se haban resistido a mostrarse por tantas razones distintas como Gminis
individuales (o duales) haba all.
Formul todos estos comentarios en voz alta delante del auditorio, y repet mi invitacin a los Gminis.
Entonces slo tres o cuatro manos se alzaron parcialmente, con mucha lentitud y vacilaciones, en el atestado
recinto. Sbitamente todos estallaron en una tempestad de risas mientras las cabezas giraban hacia el fondo
del saln, donde lo que pareca una fila de bailarines de conga, integrada por doce o ms Gminis, intentaba
evadirse furtivamente por la puerta. A medida que arreciaban las carcajadas, y que la gente empezaba a llamar
por sus nombres a los Gminis que conoca, todos estos salieron corriendo, literalmente, delante del
estupefacto portero. Todos los presentes, incluida yo, nos desternillamos de risa.
Y as encontr en forma completamente accidental lo que result ser un mtodo muy ilustrativo, adems
de hilarante, para demostrar la validez de los signos solares a una numerosa concurrencia de escpticos y
creyentes.
No s si ello tuvo alguna relacin con la veloz partida de las aves de Mercurio, pero quiz deba hacer
notar que aquella noche estaba sentado en el proscenio el difunto jefe del FBI, J. Edgar Hoover, que haca una
de sus rarsimas apariciones en pblico. Fue obvio que el seor Hoover manifest mucho inters en el xodo,
y tuve la patente impresin de que estaba ansioso por hacerle seas a alguien para que verificara la identidad
de los invitados que preferan escabullirse en lugar de dar la cara... y quizs incluso para que los siguieran
hasta sus casas. Pero, como era un capricorniano, comprendi, por supuesto, que uno no debe comportarse tan
incorrectamente en una reunin social. Eso trasgredira las normas.
Los dones gemelos de Mercurio la simpata y la locuacidad convierten al Gminis tpico en un experto
domador de Leones, que engatusa astutamente a Leo para que salte con docilidad por sus aros dobles. Por
ejemplo, es posible que Leo le pregunte a Gminis: Cmo soy yo en realidad? O sea, qu impresin le
produzco a la gente?.
Y Gminis contestar: Bueno, eres increblemente eglatra y arrogante. Pero tambin eres
desprejuiciado, cordial y generoso. (Cuando se trata de los Leo, hay que sacudirles la verdad dolorosa al
comienzo, y luego asestarles un cumplido como broche final.) Pero es posible que el Len o la Leona
persevere, acariciando su vanidad y preguntando: Los dems ven mis virtudes con tanta claridad como t?
Y si las ven. por qu siempre me subestiman?.
GMINIS: Claro que las ven. Todos saben que eres una persona fantstica, un poco engreda, y
ensoberbecida, pero sabes organizar maravillosamente las cosas. Es obvio que eres ms sensato y sereno que
el individuo medio. Quien no te reconozca estos mritos debe de estar celoso, y no merece que le hagas caso.

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Veis cmo se hace? Cuando conversis con un Len, intercalad la verdad cruda entre gruesas rebanadas de
caluroso halago. Mercurio tiene una tcnica para ello, que consiste, digamos, en mostrarse servil mientras
habla con franqueza.
En realidad, los Leo son excelentes organizadores, expertos en delegar autoridad, y suficientemente fijos
como para esperar con compostura el xito final de sus grandiosos planes y promociones. Pero es posible que
no tengan la misma paciencia para soportar la inconstancia de Gminis. A los grandes gatos los indigna la
tendencia de los Gemelos a cruzar velozmente por la vida, desechando las convicciones pasadas como si se
tratara del peridico de ayer, desprendindose de hogares y empleos y amigos con pequeos defeca tos,
demasiado pronto, sin la menor reflexin retrospectiva, y limitndose a correr extasiados en pos de los nuevos
intereses que los fascinan. Para el Len o la Leona ms leal y ms lnguido, lo rpido no es siempre lo mejor,
ni lo justo. Entonces Leo se sentir obligado a esclarecer a Gminis con uno de sus pomposos discursos.
Te las ingenias bastante bien para maniobrar en la lechera y recoger la crema acumulada al ras, pero sta
siempre se te agra. La agudeza mental de la que tanto te envaneces te llena de zanjas el sentido comn, y
cuando menos lo esperes tropezars con ellas. Algn da me agradecers esta advertencia.
Los Leo, eternos hermanos y hermanas mayores, no pueden resistirse a pronosticar que algn da las
personas que guiaron con benevolencia querrn reverenciarlos y los buscarn para agradecerles sus sabios
consejos espontneos. Como si Gminis tuviera tiempo para detenerse y confeccionar una lista de estas
obligaciones. Los pjaros de Mercurio estn demasiado atareados vendiendo esa crema agria como suero de
manteca. En cuanto a las zanjas contra las que los alert Leo, los Gminis se limitarn a saltar fuera de ellas.
Aterrizarn en pie y volvern a patinar sobre el mismo hielo frgil, mientras Leo se enfurrua y pregunta con
tono petulante: Es que nunca caes en la trampa?.
Bueno, s, a veces los Gminis caen en la trampa de su propia astucia. Pero, por qu preocuparse, cuando
el valeroso rey (o reina) los sacar de aprietos mediante un estupendo rescate de ltimo momento, en
tecnicolor? Entonces Leo se ruborizar y har una (modesta) reverencia, mientras Gminis entona el halago
favorito del Len: Caray! Todo lo que decas era muy cierto. Gracias por habrmelo advertido a tiempo. No
s qu hara sin ti, exclaman los Gemelos, muy probablemente con sinceridad, ahora que han conseguido
disfrutar de lo mejor de ambos mundos (la proteccin regia, ms la libertad).
No importa responde modestamente el Len o la Leona, ronroneando y revolcndose en el blsamo de
la simpata geminiana. El ms fuerte y sabio tiene el deber de proteger al dbil y tonto de sus locuras. En el
futuro no te olvides de hacer lo que te digo, y no pasars apuros.
Est bien, lo prometo!, exclaman jubilosamente los Gemelos, mientras hacen un ademn de despedida y
salen disparados. Pero Gminis sabe, en el fondo de su ser, que lo que ha dicho Leo es cierto. Frustrante,
engorroso, a menudo indignante... pero cierto.

Mujer GMINIS Hombre LEO


...ella le cuenta historias acerca de l mismo, que l escucha vidamente...
El hombre Leo negar a menudo su complejo de superioridad y procurar ocultar su exagerada necesidad de
sentirse respetado, pero no podr engaar a la espabilada mujer de Mercurio que lo ama. Una mujer Gminis
que conozco jur una vez a un grupo de amigos congregados en la sala de su casa que su marido Leo no tena
ninguna de las caractersticas de su signo solar.
Philip no es vanidoso ni desptico insisti ella. Es un hombre modesto, que no se siente superior a
nadie.
No deseo dominar a la gente murmur parsimoniosamente el modesto Philip. No soy ms que un
hombre comn y corriente.
Odo lo cual su esposa Gminis se apresur a agregar:
Es ms que un hombre comn y corriente. Es superespecial. Lo que quise decir es que no es autoritario,
y ciertamente no es un exhibicionista egocntrico.
Esto embauc a todos los presentes. El anfitrin benvolo, afable, de modales corteses, no era, obviamente,

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un Len rugiente. Reposaba discretamente en un rincn, despidiendo una irradiacin suave, clida, y no
trataba de controlar la conversacin. Por supuesto, yo podra haber desengaado a sus huspedes. Pero para
entonces mi amiga Gminis haba acariciado tan inteligentemente a su enorme Len hasta hacerlo ronronear
complacido, que no me atrev a desenmascarar su jueguecito tpico de Mercurio.
Qu creis que hace este Gatito tmido durante todo el da, cuando no est relajndose lnguidamente en
casa y aceptando los cumplidos de su cnyuge con aire humilde? Se dedica a una rama especial, intrincada,
del derecho: contratos petroleros en otros pases. Gasta muchsimo dinero, que gana invirtiendo su tiempo muy
valioso en explicar a industrias de muchsima magnitud qu es lo que pueden y lo que no pueden hacer.
Cuando impartes consejos a multimillonarios y le das un coscorrn ocasional a compaas como Exxon y
Standard Oil, no necesitas vas de desahogo adicionales para el ego de Leo.
Un Len que est en el proscenio de su trabajo, donde ejercita su vanidad y transmite su sabidura, puede
darse el lujo de ser un poco humilde en la vida social. Sobre todo si tiene una esposa Gminis, que sabe muy
bien cmo regalarle el odo con bellas lisonjas. ya no necesita incurrir en vulgares jactancias respecto de s
mismo.
Gminis y Leo vibran en una configuracin de signos solares 3-11, as que a menudo su relacin exige
sacrificios, que a su vez rinden grandes beneficios, en razn del vnculo krmico que los une: el recuerdo de
vidas pasadas. Como en todas las vibraciones 3-11, esta asociacin suele estar predestinada, y es difcil de
resistir, tanto en el mbito de los lazos familiares o profesionales, como en el de la amistad y el romance. El
hombre Leo se siente obligado a dictar a la chica Gminis lecciones que podrn modificar realmente la vida
de sta. Se siente ms obligado a dictrselas a ella que a otras personas, y esto ya es mucho decir. Ella puede
prepararse para que l le endilgue ms discursos que los que habitualmente pronuncia Leo, pues se trata de un
hombre que le sealar sin parar sus defectos y le dir qu es lo que hace o piensa equivocadamente, ya sea en
lo que concierne a su dieta y a su forma de vestir o a sus ideas polticas y sus conceptos religiosos. Pero el
mismo recuerdo krmico que lo impulsa a aleccionar a Gminis genera un sentimiento inconsciente de
gratitud por antiguos favores recibidos, y determina que el Len tambin desee proteger a la chica Gminis.
l comprende instintivamente las limitaciones de ella, incluso mientras procura corregirlas.
Asimismo, la mujer Gminis sale en defensa de su Len. Quiere salvaguardarlo del dolor que le causan
los dems cuando hieren involuntariamente su gran vanidad. Dentro de su corazn sensible hay algo que le
advierte qu es lo que debe decir y hacer, en el momento justo, para que afloren la clida ternura y la
generosidad de l. Ella lo ve como un refugio seguro y carioso dentro de un mundo de escpticos que no la
entienden. Naturalmente, esto halaga el orgullo masculino del gran gato, orgullo que est ms desarrollado
en l que en el hombre medio, y aumenta la adoracin que siente por ella. As puede gestarse lentamente una
sociedad de admiracin mutua.
Sin embargo, esta compatibilidad bsica no evitar que ambas partes tengan accesos de rebelda. La
despreocupacin etrea de ella puede inflamar el carcter de Leo, que tarda en entrar en combustin, pero
que una vez excitado y ardiente es difcil de sofocar. Es posible que ella aproveche entonces la reyerta para
practicar su sintaxis y su irona, que producirn una herida muy profunda en el ego de Leo. Si las mltiples
fascinaciones mercurianas y actividades externas de ella la distrajeran del culto diario al Len, ste se
preguntar lo que todo otro monarca se pregunta cuando sus sbditos estn demasiado atareados para
congregarse a su paso y aclamarlo:. acaso ya no son leales a su Rey? Acaso ella ha encontrado a alguien a
quien admira ms que a l?
La pobre chica sencillamente no imagina lo que arriesga. Todas las mujeres que l am y abandon, antes
de conocerla a ella, quedaron francamente devastadas por la afliccin... tal como se lo explic muchas veces.
Ser mejor que ella proceda con mucho tacto, porque si no Leo sacar su manoseada y voluminosa agenda
negra y marcar algunos nmeros comprendidos entre la A de Alice y la Z de Zelda. S, la mayora de
sus antiguas enamoradas se han casado, aunque un par de ellas se recluyeron en un convento. Pero Leo est
convencido de que cualquiera de las esclavas que l desech (incluidas las monjas) saltara chas! tal
cual! si sospechara que existe la ms remota posibilidad de que Su Majestad vuelva a ponerla a su
servicio. Algunas mujeres saben reconocer su suerte.
Como Leo es ms fijo, y por tanto ms prctico que la mutable Gminis, la conducta inestable de ella
puede provocar en el Len algunos estallidos de clera. Es posible que, excitada por la lectura de un nuevo
libro, olvide prepararle la cena; o que se ponga a parlotear por telfono cuando l necesita un auditorio; o que
desista de ir al teatro cuando l ya ha reservado las butacas; o que olvide dnde ha aparcado el auto, o
extrave las llaves, o ahogue el motor. l nunca incurrir en semejante negligencia. (Realmente no.) Resulta
irritante, pero Leo es, en verdad, inmensamente capaz, un hombre a carta cabal que enfrenta las emergencias

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con espontnea naturalidad, con un regio encogimiento de hombros, y con la pregunta tcita: A quin
no?.
Aunque a la chica Gminis le encantarn su tenacidad, su lealtad, su inteligencia y su integridad, es
posible que se ponga melanclica e inquieta en presencia del Len y que lo distraiga cuando l procura
trabajar, estudiar, o simplemente relajarse. Es posible que lo haga sentir inferior al suplicarle que le pague
unas vacaciones costosas cuando l est temporalmente en bancarrota, aunque su exagerado orgullo no lepermita confesarlo.
Estas cosas lo harn rugir, pero probablemente la disculpar apenas ella saque a relucir sus zalameras
geminianas y sustituya rpidamente al Gemelo verstil, temerario y amargo, por el Gemelo sensible,
femenino, carioso. En cuanto a las actividades externas de ella, a l no le molestar que tenga una carrera,
que estudie danzas clsicas, que practique aerobismo, que coleccione momias o que cace mariposas... siempre
que ninguno de sus empleos o hobbies asuma prioridad sobre l. Pero la chica Gminis nunca deber provocar
a su altivo hombre Leo recordndole que los grandes gatos machos de la naturaleza que viven en la jungla
salvaje permiten que sus consortes salgan a cazar mientras ellos dormitan al sol... porque es posible que
entonces l la retire de la cacera, la convoque a casa, y la recluya definitivamente al servicio de su vanidad.
Adems, esto vale para los leones-leonas, no para los Leones humanos. En su condicin de Leo, l
tambin tiene un derecho regio. Acaso un rey permitira que su reina se ocupara de los asuntos de Estado y
manejara el Tesoro, all en el castillo, mientras l sale de cacera o se hace probar una nueva corona?
Bueno, s, probablemente lo permitira... si ella se comportara con la debida humildad. Al fin y al cabo,
ella debe tener un objetivo vlido en la vida, como el de cuidar que l se sienta feliz y contento. De todas
maneras, la favorita del rey ciertamente tiene sus recompensas. El Len es muy divertido, generoso con su
tiempo y su dinero, fuerte y valeroso, e incluso manso, cuando le acarician suavemente el ego en la direccin
apropiada. Por ltimo, pero ciertamente no porque ello sea menos importante, es un amante maravilloso. El
talento geminiano de ella para la fantasa llenar de emocin sus relaciones fsicas, y si contina evocando en
l la sensacin de que es un conquistador sexual, Leo seguir siendo un monarca satisfecho y mongamo.
Es posible que un Leo cumpla todas sus promesas romnticas bajo el toque ligero, nada egosta, de la mujer
Gminis, cuya actitud vivaz respecto del sexo estimular los deseos ms fogosos de l, por lo menos al
principio. Sin embargo, es posible que l empiece a sentir gradualmente que falta algo. Mientras l hace el
amor a un Gemelo, el otro observa framente la escena. Esta participacin parcial puede traumatizar al
hombre Leo.
Para un Len de corazn ardiente, la sexualidad es sinnimo de afecto y pasin. En el amor de Gminis
hay un elemento de vago distanciamiento. l puede seducirla desde el punto de vista emocional y fsico, pero
la mente de ella se resiste a entregarse por completo al xtasis sensual. La incapacidad para conquistarla
totalmente puede destruir la imagen de virilidad que el Leo necesita tener de s mismo. Entonces ella se
quejar de que l no pone inters en el acto amoroso, cuando la verdad es que el fro desapego y el
comportamiento dual de Gminis ha generado en l un temor a su posible incompetencia sexual, que es muy
renuente a exhibir, porque nada aflige tanto al hombre Leo como la sola sospecha de que puede no ser el
amante perfecto. Ella deber recordar que este hombre es un idealista sexual, y deber emplear su
imaginacin tpica de Mercurio para inventar nuevas formas de saciar el anhelo de l por disfrutar del
romance y el sentimentalismo como msica de fondo de su intimidad fsica, en lugar de utilizarla para
remontarse ella sola sobre una nube cuando l ms necesita saber que la tienen cerca, descansando sobre su
corazn.
Puesto que Gminis es una lingista nata, deber saber traducir las rdenes arrogantes y regias de su Len al
lenguaje de la pasin y la necesidad.
Hablas demasiado. Por qu no te callas un poco?, significa que la vanidad de l est herida, porque ella lo
ha eclipsado nuevamente con sus talentos gemelos para mostrarse sagaz y espabilada.
Olvida la cena. Me voy a otra parte y cenar solo, significa que ella lo ha descuidado ms de lo debido,
mientras corra sin parar en pos de ideas y personas interesantes, y que su orgullo necesita halagos.
Cancela el compromiso de asistir a la fiesta del sbado por la noche. Diles que no podemos ir. Inventa
alguna excusa. Nos quedaremos en casa, significa que l prefiere estar a solas con ellas dos durante el fin de
semana, en lugar de ponerse sus galas y solazarse con la admiracin de la multitud. Y, seora, viniendo de un

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Leo, esto s que es amor!

Hombre GMINIS Mujer LEO


Pienso que debe de ser una seora... una seora para ocuparse por fin de nosotros
dijo uno de los Gemelos.
Debis reconocer que toda Leona alimenta, con la mayor naturalidad, el deseo instintivo de domesticar al
hombre que ama, de convertirlo en algo de su exclusiva propiedad. Necesita un hombre en quien pueda
depositar una confianza absoluta, un hombre que sea obviamente ms fuerte que ella y que, sin embargo, la
venere sin reservas. Es mucho pretender. Sobre todo cuando se propone domesticar a un Gminis.
En el juego del amor, como en el juego de la vida y el vivir, este hombre es lo que los tahures llaman un
mirn. Anda rondando, siempre con algunas bazas escondidas en la manga, y conoce las manos de todos y
confa en que, si fuera necesario podra hacer pasar un par de sietes por un pker de ases. Sabe mucho de
todo, pero no lo suficiente como para dar el gran golpe y poner fin al desafo que tanto lo desconcierta. Al
Gminis le parece ms razonable ser aprendiz de todos los oficios y oficial de ninguno. Veris, es que una vez
que te conviertes en experto en cualquiera de ellos, la gente tiene la fastidiosa costumbre de pretender que te
quedes donde ests, haciendo siempre lo mismo.
Gminis es un signo de Aire, constantemente impulsado por la necesidad de cambio, de cualquier cambio con
tal de que sea un cambio, pequeo o grande, que lo lleve al prximo garito con puestas interesantes. A
diferencia de los otros dos tahures astrolgicos, Leo y Sagitario, los Gemelos siempre quieren entrar y salir
deprisa, con una ganancia o una prdida rpida, para despus repetir la tentativa. Gminis piensa que si intervienes en suficientes partidas, al fin triunfas sobre los errores de criterio y la mala suerte. Para el hombre
Gminis tpico, nada de inversiones a largo plazo en una carrera, en vnculos familiares, en la amistad o el
romance. Al menos, no mientras es joven. (Por supuesto, debis comprender que esto puede abarcar mucho
tiempo, porque Gminis nunca envejece.) Para el tpico hombre regido por Mercurio, la vida consiste en una
serie de dirigibles de juguete y frgiles pompas de jabn, que discurren entre un atajo de nios traviesos
armados con alfileres punzantes. Hay que ser gil para saltar por encima de ellos, para guiar los dirigibles y
dispersar las pompas fuera de su alcance, en el momento justo, de dnde provienen los dirigibles y las
pompas? Jams se lo ha preguntado. Slo sabe que nunca cesan de llegar. Hay que ser veloz: para seleccionar
los mejores y detectar aquellos a los que hay que cortarles el cordel antes de que se desinflen. Aquellos
dirigibles de juguete, se entiende. En cuanto a las pompas de jabn, es hermoso contemplaras y divertido
inflarlas, pero Gminis no comete el error de pretender hacerlas durar. Los dirigibles son distintos. Son ms
resistentes, y es posible que uno de ellos lo lleve a donde l va... si supiera, al menos, qu lugar es se.
Tomemos a las mujeres, por ejemplo. Gminis sabe o cree saber cul de ellas volar con l y no lo
frenar colgndose de su manga, y cules son las que debe rehuir porque creen que el volar es para los
pjaros. (Lo es, pero esto incluye a los pjaros de Mercurio, como l.) Al principio, pensar que la Leona
pertenece a la primera categora, porque ciertamente no se le colgar de la manga. Tiene otros recursos, ms
sutiles, para frenarlo.
sta es, como tal vez el lector ya lo sepa, una de esas relaciones predestinadas de la configuracin de
signos solares 3-11, planeadas hace mucho tiempo por sus personalidades superiores. Termine en amor o
amistad, est igualmente preada de obligaciones krmicas, signadas a menudo por un extrao destino, que
siempre impulsan a cada una de las partes hacia un sacrificio inusitado o una devocin excepcional... o hacia
el uno y la otra. El que la vibracin 3-11 (algunas, desde luego, implican negocios o vnculos con familiares
consanguneos) desemboque en un amor perdurable o en una relacin platnica depende de muchas cosas,
entre las que se cuentan los aspectos mutuos de sus soles natales, signos lugares y ascendentes, y otros
intercambios planetarios entre sus cartas natales.
Si la chica Leo se propone entablar una relacin estable, antes deber domarlo. Esta operacin no se
parecer a la doma de ninguno de los otros animales machos del zoo astrolgico. Es ms complicada. El

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hombre Gminis es ms escurridizo y evasivo. Adems, recordad que son dos. Las compuertas de salidas de
los Gemelos se hallan ocultas tras una locuacidad y unos modales tan cautivantes que este hombre es capaz de
desaparecer mientras la chica an desfallece bajo el velo de seduccin con que l la envolvi, como si de una
delicada telaraa se tratara, para disimular su partida y hacrsela ms soportable. (Es un hombre de buen
corazn.) Pero la Leona les lleva la delantera a estos ardides de Mercurio, porque la mujer Leo no desfallece
por los hombres. Los hombres desfallecen por ella, y no olvidis este detalle.
Para domarlo, ella deber salvar un obstculo ms peliagudo que el que implica no dejarse cegar por sus
telaraas de seduccin, y dicho obstculo consiste en que para el hombre Gminis todas las mujeres son
iguales: seres que amenazan su libertad, que recelan de su comportamiento imprevisible, que siempre exigen
que l las ame hoy exactamente como las am ayer. Cmo es posible que las ame as, cuando sus emociones
tienen tantas magnitudes distintas de profundidad y envergadura? Tarde o temprano, la mujer empieza a
regaarte porque no tienes un objetivo concreto, y a quin se le ocurre correr en pos de cosas slidas? Como
la mayora de las mujeres aburren al hombre Gminis, que las encuentra a todas iguales, la chica Leo deber
convencerlo de que no se parece a las dems. Deber entrenarlo, y domarlo... para que l aprenda a escuchar
sus pasos, su risa, su voz... para que se d cuenta de que su vibracin es singular y slo a l le suena a msica,
y de que su aura es distinta de la de cualquier otra mujer del mundo. Quizs incluso podr ensearle a ver que
las vetas doradas y leonadas de sus ojos son idnticas a las de un fragmento precioso de mbar, para que cada
vez que ve una sortija o una pulsera de mbar durante sus viajes recuerde...
Entonces el mbar siempre le parecer bello, porque le har evocar la imagen de su clida sonrisa, de su
espritu orgulloso, del resplandor de sus ojos... y le tironear del corazn para inducirlo a volver. No slo a la
sonrisa y el espritu y los ojos de ella, sino a todas sus otras virtudes que echa de menos. Por ejemplo, a su
inteligencia; a la forma en que marcha por las colinas junto .a l con su paso grcil de Leona, sin cansarse; a
la forma en que se yergue sobre la silla cuando monta a caballo; a la forma en que se zambulle en el agua, en
que se desliza por las pendientes sobre sus esqus, en que blande la raqueta de tenis o lanza la pelota de golf.
Generalmente las mujeres Leo sobresalen en uno o dos deportes al aire libre, sin contar los que se desarrollan
bajo techo: la representacin teatral, el baile, el romance, y as sucesivamente... y, como las doncellas lunares
de Cncer, muchas de ellas son fotgrafos aficionados o profesionales.
Ella deber sembrar todos estos recuerdos en la cabeza de l y convencerlo de que es nica. Esto forma
parte de la domesticacin de Gminis. La chica que ame a este hombre deber mantenerse a la par de su
mente y su cuerpo, para no hablar de sus dos personalidades independientes y de sus mltiples estados de
nimo. Al cabo de un tiempo empezar a verla como la mujer ms singular que ha conocido en su vida. Pero
slo estar completamente domado cuando la vea como la mujer ms singular que conocer en su vida.
Existe una marcada diferencia, y la Leona comprender enseguida a qu me refiero.
En realidad, esta mujer es nica. Es una dama innata, y ya no quedan muchas as. La mujer Leo puede
revolcarse por la hierba, trepar a un rbol, cambiar un neumtico o ejecutar una serie de actos que
tradicionalmente pasaban por ser poco femeninos, pero su talante seguir siendo tan espontneamente garboso
y aplomado como si estuviera avanzando por una alfombra roja hacia el lugar de su coronacin. (Una chica
debe tener mucha clase para conservar la tiara derecha mientras levanta el eje trasero de un auto.) El aura
regia est siempre presente. Si alguien se re, se mofa de ella o comete el tremendo error de tratarla con
excesiva familiaridad cuando ella no lo ha invitado a entrar en su crculo ntimo, la Leona se encerrar en una
glida torre de altivez tan imponente que el trasgresor huir con el rabo entre las piernas o desear que la
tierra se abra y lo trague misericordiosamente. Al igual que la tpica mujer capricorniana, la Leona tpica
irradia un aire patente e inconfundible de refinamiento. Este, ya sea real o slo ilusorio, es tangible y visible.
El nico punto dbil que existe en su armadura de majestuosa dignidad es la tendencia de Leo a ser
obviamente vulnerable a las lisonjas. En cualesquiera otras circunstancias, empero, la sangre regia corre con
un marcado tinte azul, y sus modales son altaneros, orgullosos, propios de una reina. El hombre Gminis que
llama a su mujer nena o pollita, literal o indirectamente, no tardar en aprender lo que significa el
trmino dama.
l deber acostumbrarse (y probablemente se acostumbrar de muy buen grado) a dejar que ella coseche
la mayora o todos los aplausos en pblico. La Leona atraer sobre s casi toda la atencin, aunque no la
busque. Esto es producto del sutil manto de realeza que flota sobre todos los Leo que han nacido hasta hoy.
Aunque ella le hable con la mayor dulzura, aunque ella lo mire con adoracin, como si l fuera la estrella del
espectculo, casi todas las cabezas se volvern hacia ella y no hacia l, y esto ocurrir independientemente de
que l sea muy apuesto, vivaz, ingenioso e inteligente. En el porte de ella, en su forma de hablar lnguida y
confiada, en la forma en que aparta descuidadamente la melena de sus ojos con un movimiento de cabeza, hay

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algo que sugiere la presencia de un carisma real.


Ella lo hace sin mala intencin. Una autntica Leona noble, cariosa y enamorada, nunca usurpa
deliberadamente el puesto de su consorte (ni de ninguna otra persona). Pero no puede evitar que los nativos
estn inquietos y claven los ojos en ella. Por suerte, el hombre Gminis casi nunca es exagerada o
indebidamente posesivo, as que probablemente interpretar la popularidad de ella como otro elemento de su
singularidad. (Ya veis, lo estn domando gradualmente.) Quiz se consuele recordando que el presidente
Gminis Jack Kennedy se present custicamente en Francia como el hombre que acompa a Jacqueline
Bouvier a Pars. Jackie, como ya debis saber, es una Leona.
Estadsticamente, la compatibilidad sexual de los amantes de estos signos solares exige a menudo ciertos
ajustes y compromisos recprocos. Para empezar, nada puede enfriar el calor de una Leona tanto como un
engao o la deslealtad de su consorte, y esto lo incluye todo, desde un coqueteo inofensivo hasta una
infidelidad sexual concreta. Al hombre Gminis le resultar ms fcil perdonar los celos y el fogoso orgullo
posesivo de la Leona cuando la situacin se invierta, porque entonces ella le dar una idea clara de la
sensacin que producen la indiferencia y el rechazo. A l esto no le gustar nada, pero su indignacin no ser
tan grande como la de ella, en la misma situacin. Gminis lo toma todo un poco ms a la ligera que el resto
de la gente, y por cierto mucho ms a la ligera que un signo de Fuego tan vehemente como Leo.
Sin embargo, cuando ella lo haya domado realmente, es posible que los celos nunca sean un problema
para ninguno de los dos. Entonces el problema ser de simple tcnica romntica. 1_,? Leona bien amada es
una mujer excepcionalmente afectuosa y cariosa. Puede desplegar una pasin exacerbada y una lnguida
sensualidad. Pero una Leona amada con negligencia es extremadamente susceptible a los sntomas de
frigidez. No es una mujer a la que le gustara ser violada por un amante con aires de gorila (King Kong no es
su fantasa secreta), ni es una mujer capaz de sonrer indulgentemente ante la torpeza de un escolar ruboroso,
que la sofoca con su adoracin canina. Pretende que el hombre le haga el amor con refinamiento. El Gminis
sencillamente destila refinamiento, encanto y delicadeza. Pero a veces su toque puede ser tan sutil, y sus
tcnicas de seduccin tan etreas, que ella intuye que podra volatilizarse delante de sus ojos, antes de que se
colme su amor fsico. Para satisfacer las necesidades ms profundas de ella, que son evidentemente ms
fogosas que las de l, tendr que subyugarla de vez en cuando con una escena dramtica de entrega frentica y
exttica.
Por lo menos, l deber hallar a menudo la forma de hacerle saber que no puede resistir la magntica
alquimia sexual que se forja entre ambos. Para ella, la unin fsica es algo ms que un desafo intelectual de
Mercurio o un ejercicio emocional. La Leona an oye el dbil llamado de la jungla. Pero se desplegar
tiernamente ante la acometida imaginativa de Gminis si l aumenta ocasionalmente su vehemencia, y si
recuerda que ella necesita que le digan cun bella y deseable es, para reaccionar cabalmente. La mujer es
bella slo cuando es amada. Especialmente la mujer Leo.
Este hombre y esta mujer son prdigos con las palabras... y con el dinero. Comparten un gusto exquisito, les
encanta acicalarse, son igualmente aficionados a los viajes, a la literatura y a las artes. Tambin son
igualmente expertos en conseguir lo que anhelan: ella merced a la adorable cualidad de reivindicarlo como un
derecho, y l mediante su irresistible adulacin. A la chica Leo le resultar ms fcil domesticar al hombre
Gminis si recuerda las reglas para domesticar a cualquier pjaro inquieto y activo, pero curioso. Se necesita
mucha paciencia, y hay que empezar por sonrerle con los ojos, desde lejos... cuidando de no moverse
demasiado aprisa, para no espantarlo. Al comienzo lo mejor es la comunin silenciosa, porque las palabras,
sobre todo entre estos dos signos solares, contienen a menudo las semillas del malentendido. Entonces, si ella
se le aproxima un poco ms cada da y nunca le da motivos para pensar que su libertad est amenazada...
El hombre Gminis necesita que le recuerden que en su existencia cambiante, mercurial, hay algunos
elementos que son muy especiales y nicos en todos los mundos por donde anhela deambular. Por ello
ser ms feliz despus de que lo dome la orgullosa Leona, aunque no sea ms que por la nueva belleza del
mbar que nunca podr volver a mirar sin recordar las vetas doradas de sus ojos.

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GMINIS

VIRGO

Aire - Mutable - Positivo

Tierra - Mutable - Negativo


Regido por Mercurio (tambin por el
planeta Vulcano)
Smbolo: la Virgen
Fuerzas nocturnas Femenino

Regido por Mercurio


Smbolo: los Gemelos
Fuerzas diurnas - Masculino

La relacin GMINIS-VIRGO
Partimos como los seres ms insensibles del mundo, que es lo que son los nios, pero muy
atractivos... disfrutamos con el mayor egosmo; y entonces, cuando necesitamos atenciones
especiales volvemos a buscarlas notablemente, confiando en el hecho de que nos abrazarn en
lugar de zurrarnos.
Es posible, en verdad, que los traviesos Gemelos Gminis les parezcan, a los Virgos ms cuerdos y serios,
unos cros insensibles. Siempre andan corriendo en pos de telaraas y espejismos, brincando como
saltamontes, y tienen accesos de locura' de verano y tratan de estar en dos lugares a la vez. Desde el punto de
vista del tpico Virgo realista, es obvio que los bruscos cambios de sentimientos y de ideas que sufre el
Gminis son un defecto que hay que corregir inmediatamente.
La perfeccin no es una cualidad que a los Gminis les guste cultivar. Valoran, quizs incluso
admiran y ciertamente necesitan las actitudes ms estables de Virgo, y a menudo los tranquiliza
descubrir que el pariente, amigo, socio, amante o consorte Virgo sigue all, en el mismo lugar donde Gminis
lo dej cuando vol por unas pocas horas (o semanas, o meses, o aos) para indagar qu suceda allende la
montaa. Pero si los regaa cuando regresan, sencillamente volvern a largarse. A los nios no les gusta que
los regaen. Y todos los Gminis son esencialmente nios de alma. Los Virgo, en cambio, no.

Los Virgo se sienten muy responsables por los deberes vitales y tienen una conciencia madura de la
fiabilidad. Se cien a esta esencia de su signo solar, o en caso contrario se sienten culpables y esto les produce
urticaria, lceras, o hipo. A la inversa, Gminis rara vez se siente culpable de algo. O por lo menos no lo
demuestra.
En el caso de Virgo, todo est a la vista. Sobre todo las preocupaciones secretas, acuciantes. Como Virgo
rige las vsceras, los intestinos y el plexo solar, estas preocupaciones acuciantes, que al principio se traducen
en un ceo ligeramente fruncido, y despus en los labios apretados, pueden producir verdaderas infecciones o
alteraciones en aquellas reas. Cuanto ms secretas sean las desazones, tanto ms fcil ser que se manifiesten
mediante nuseas, indigestiones o estreimiento. Estas personas deberan desahogarlas ms a menudo, hablar
de ellas, expresarse, decir lo que piensan (pero no demasiado a menudo, porque entonces no serian fieles a su
signo solar).
Gminis es un experto en sacarlo todo a la luz, excepto cuando se trata de infortunados Gminis con un
ascendente o Luna en Virgo. A stos les encantara conversar alegremente y esparcir ideas, y sin embargo, se
encierran en un silencio desasosegado, mientras se miran los dedos y cuentan las lneas de las palmas de sus
manos que cruzan con ademn nervioso. El conflicto puede ser muy serio. La mayora de los Gminis,
empero, podran ensear productivamente a los Virgo la manera de sobresalir en la charla gregaria, en la

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garrulera jocosa y en la sintaxis coruscante. Es indiscutible que Virgo sabe deletrear todas estas palabras,
pero ponerlas en accin es otra cosa.
El intelecto de Virgo est tan aguzado como el de Gminis (gracias a Mercurio, que gusta atribuirse el
gobierno de estos dos signos, con su casco de plata y sus talones alados), pero es menos vacilante y verstil
(gracias a la influencia oculta del verdadero regente de Virgo, el tronante Vulcano que an no ha sido visto).
Los Gminis ejecutan rpidos malabarismos con los pensamientos y generan ideas, que a menudo parecen
brotar del aire, su elemento natural, pero Virgo casi nunca es malabarista ni creativo. Los Vrgenes estn
demasiado ocupados discriminando y distinguiendo y separando los hechos de las fantasas, muchas veces
con lo que podra parecer una precisin excesiva. El explorador-experimentador Gminis busca el espritu de
la ley. El purista-estadstico Virgo se cie a la letra de la ley.
A la mayora de los Virgo les resulta difcil entender el concepto de dlar, porque abarca una cantidad
fascinante de centavos. Se distraen contando todas las monedas, con la conviccin de que si controlas los
cobres refulgentes, los billetes verdes se acumularn por s solos, sin ayuda. Gminis piensa en gran escala, en
trminos ms vastos, y normalmente arroja los centavos sueltos a los pozos de los deseos, sin contarlos.
Lanzar una moneda intachable a las aguas turbias en aras de una supersticin estpida? Otra vez aparece la
arruga en el ceo de Virgo, la veis? Empieza a fruncir la frente sobre esos ojos claros, hermosos.
Ahora que entendis algunas de las diferencias obvias entre estos dos signos solares, podis imaginar el
torbellino que debe de bullir en el pecho de un Virgo con un ascendente o Luna Gminis, o de un Gminis en
la situacin inversa. Tener que enfrentar semejante variante metodolgica con un compaero extrao es
suficientemente lacerante, sin necesidad de tener que enfrentarla todas las maanas en el espejo, agazapada en
su propio carcter y personalidad. Enviadles muchas tarjetas de solidaridad. Algunos, como he dicho en otra
parte, se convierten en despertadores humanos; otros se sientan sobre un balancn de indecisin, incmodos
cuando hablan y dos veces ms incmodos cuando estn callados.

Sobre la asociacin Gminis-Virgo influye una configuracin de signos solares 4-10, as que su relacin
mutua nunca descansar sobre la frivolidad pura y el escapismo. La seriedad y el respeto (o la falta de ste) se
entrelazarn con los eslabones que unen a stos dos, y a ambos les resultar difcil comprender cabalmente los
verdaderos objetivos y la filosofa bsica de la otra parte. Esto no se debe interpretar en el sentido de que no
pueden generar juntos una clida armona. Slo se trata de que habr que alimentar prdigamente las
chimeneas y los hogares con el carbn de la comprensin y la tolerancia mutuas. Sin embargo, al fin se
pueden lograr, con un poco de esfuerzo, la paz y la compatibilidad, porque a menudo existe, oculto bajo las
desavenencias superficiales de estos dos, un sutil intercambio de lealtad y afecto.
Hay que admitir que el hombre o la mujer Virgo promedio no se dedica a provocar conflictos, y
generalmente tampoco se apresura a reaccionar cuando stos se producen, a diferencia de los Gminis, que
siempre montan una tempestad con un solo soplo de aire turbulento, y que frecuentemente arremeten como
huracanes ante lo que interpretan como el continuo hostigamiento crtico de Virgo. Por supuesto, para
Gminis una reyerta no es realmente una reyerta, sino slo un duelo intelectual. Para el signo de Tierra Virgo
las controversias son ms profundas, y las ofensas son ms perdurables. La amistad y las otras relaciones
entre estos dos pueden ser estables, y en unos pocos casos ntimas, pero lo que normalmente los hace confluir
en primer lugar es una comunidad de intereses en el plano profesional o intelectual, o en la rbita de la
familia o los deberes, como en el caso de todas las personas influidas por la vibracin 4-10.
La mayora de los Virgo parecen humildes y modestos, y casi nunca se muestran excesivamente
pundonorosos y orgullosos, pero convendr que el Gminis refrene su lengua custica en los momentos
cruciales, porque habitualmente los Virgo son muy sensibles cuando alguien ofende su escaso pundonor y
orgullo. Los signos ms agresivos no entienden en absoluto al Virgo; pero al Gminis que encuentra
demasiado extenuante al Aries, demasiado arrogante al Leo y demasiado altanero al Escorpin, puede
resultarle relajante la compaa del Virgo habitualmente dulce y corts. Adems, el Gminis puede
experimentar una sensacin de alivio en razn de que con el Virgo no es necesario competir como con otros
signos solares.
Los Virgo exhiben una humildad conmovedora y atractiva, una modestia personal que despierta poca
envidia o resentimiento. Pero igualmente a los pjaros de Mercurio se les pueden erizar un poco las plumas
cuando se enteran de que, si bien Virgo nunca estar en condiciones de correr tan velozmente como Gminis
y rara vez podr arrebatarle un Gran Premio a los Gemelos, a veces se las apaa para quedarse con el puesto
ms codiciado sin siquiera insinuar que lo ambiciona y, por supuesto, sin disputrselo a nadie. A menudo los
jefes de partido eligen como candidatos de transaccin, dentro de las trastiendas polticas saturadas de humo,
y en la rbita municipal, estatal o nacional, a los individuos con signos solares, ascendentes o signos lunares
Virgo, lo cual fastidia considerablemente a los signos solares ms extrovertidos, que han estado seduciendo
plcidamente a los votantes en la primera fila, confiados en la victoria, mientras que el Virgo sale de la

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retaguardia: un advenedizo que triunfa sbita e inesperadamente sobre los caballos preferidos de la pista. Por
ejemplo, Lyndon Johnson era un Virgo, que el sagaz y astuto Gminis John Kennedy eligi
premeditadamente.
En cualquier disputa entre Gminis y Virgo, aqul casi siempre ganar el primer round, porque arremete con
ms rapidez y es ms veloz para las rplicas. Pero ganar una batalla no implica ganar la guerra. No implica
ganar nada cuando se trata de los Virgo, pues stos saben que lo que parece ser un aserto absolutamente veraz
puede estar igualmente sobrecargado de errores y de insinuaciones equvocas. El mayor talento de los
Gemelos Gminis consiste en una fascinante capacidad para torcer la verdad y la mentira de modo tal que se
entrelazan y se confunden. Esta tctica engaa a casi todos menos a un Virgo. Un vendedor Gminis de
Volkswagens que enumera demasiados datos con excesiva rapidez puede ahuyentar realmente a un cliente
potencial Virgo. No encontraris a muchos Virgo jugando a los bolos ni montando en las norias gigantes y
tiovivos de los parques de atracciones, en los cuales a los Gminis les encanta girar. Tampoco son muy
aficionados a los copos de azcar mercuriales. Pura azcar y aire, sin ningn valor nutritivo.
Gminis tiene una cautivante cualidad mgica que atrae y excita a los Vrgenes ms tmidos, y este
elemento puede generar el misterio suficiente para que la relacin sea permanentemente seductora. El
problema consiste en que los. Virgo no quedan satisfechos hasta que descubren con exactitud cmo se ejecuta
el truco mgico, y la clave de la existencia de Gminis consiste en probar algo a partir de la nada, en extraer la
realidad de la ilusin pura.
Para el Virgo de mentalidad prctica, la realidad nunca puede ser ilusin, y a la ilusin tampoco se la
puede denominar nunca realidad. ste no es ms que otro juego de palabras geminiano. Generalmente los
pjaros de Mercurio han revoloteado por una docena de ocupaciones antes de cumplir treinta aos, en tanto
que los Virgo a menudo se ofuscan cuando les piden que introduzcan aunque slo sea una pequea
modificacin en su rutina burocrtica. En cuanto al cambio de empleo, esto es algo que los Virgo normalmente encaran con la misma circunspeccin con que se elige al Presidente de los Estados Unidos. En verdad,
con mucha ms circunspeccin que la que se ha puesto de manifiesto en las elecciones de los ltimos aos.
No obstante sus diferencias y las tensiones engendradas por los tironeos con que sus soles en cuadratura
ponen a prueba sus almas mediante la difcil vibracin 4-10, Gminis y Virgo comparten una encantadora
curiosidad, una inteligencia excepcional y cierto comportamiento cautivante y agraciado, que les permite
corretear unos cuantos miles de kilmetros, juntos y felices, por los maizales del cambiante pas de Oz. Pero
si pretenden seguir unidos cuando lleguen a la presencia del Gran Mago (que, desde luego, es un Gminis), tal
vez debern adaptarse y transigir de cuando en cuando.
Los magos Gminis, fascinados por toda clase de maravillas, debern recordar que el Leador de
Lata que marchaba por el sendero junto con Dorothy y sus amigos era un Virgo, un alma bondadosa y afable,
pero solitaria, que buscaba ansiosamente un corazn humano. Y fue el sagaz Mago Gminis el que descubri
que Virgo siempre haba tenido un corazn, sin darse cuenta de ello, oculto dentro de una envoltura de metal
fro, y sin embargo ms grande que cualquiera de los otros. Eso es magia!

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Mujer GMINIS Hombre VIRGO


...su sistema era con un lpiz y una hoja de papel, y si ella lo confunda con sugerencias tena que
volver a empezar por el principio.
Ahora no me interrumpas le suplicaba l.

El primer problema con que tropiezan este hombre y esta mujer reside en el contraste entre el carcter
gregario de ella y la tendencia de l a la reclusin. Si l es un hombre Virgo tpico (excluyendo la
intervencin de un signo lugar o ascendente ms sociable), en realidad preferira, en lo ms hondo de su
inconsciente, vivir solo, sin necesidad de llevar constantemente una compaera adosada a l... aunque sea
inteligente, bonita, suave y estrujable. El hombre no puede pasarse la vida estrujando a su esposa. Debe pasar
algunas horas estrujando los planes para la seguridad futura, acomodndolos a los moldes apropiados.
Por consiguiente, es posible que cuando la chica Gminis reivindique peridicamente sus escapadas de
libertad, su amante o marido Virgo refunfue un poco, exteriormente, pero tambin es probable que por
dentro lance un suspiro de alivio. Ahora podr disfrutar de un poco de paz y tranquilidad, para calcular
cuntos tomos componen una molcula y por qu la Bolsa subi o baj la semana pasada, y para ajustar su
reloj despertador, para clasificar su ropa sucia, para contar los bigotes de su gato y para meditar sobre los
enigmas del Universo en general, sin ese parloteo constante y ese bullir de actividad. Es posible que ame
sinceramente a su chica Gminis, pero su corazn contiene gavetas ocultas que ella no est autorizada a
limpiar... ni a espiar, siquiera. Cuando ella lo deslumbra continuamente con su perfume, con su personalidad
estrujable, con su ingenio y su agilidad mental, l se confunde y pierde el rastro de las opiniones que ha
archivado en cada gaveta, e incluso del da y el ao especficos en que las guard all. Y por tanto es posible
que no se interrogue sobre el paradero de la Gminis, porque est muy complacido de gozar de un perodo de
serena contemplacin.
No por ello deja de haber algunos hombres Virgo que tienen accesos ocasionales y ms o menos
violentos de celos. Hay unos pocos. Pero cuando se analiza la cuestin es un gran error resentirse por la
diversidad de la chica Gminis, y los Virgo son expertos en anlisis. La necesidad que ella experimenta de
comunicarse con diferentes personas (y los hombres constituyen, al fin y al cabo, aproximadamente la mitad
del gnero humano) no se debe interpretar como una prueba de que es infiel o promiscua, a menos que exista
la certeza de que lo es. A veces lo es. Sin embargo, con sorprendente frecuencia, no lo es. Claro que puede
llegar a serlo si las crticas de Virgo, sus quisquillosidades y sus rezongos le hacen sentir que le estn
recortando las alas. Si hay algo que una mujer Gminis no puede soportar, eso es que le recorten, le cercenen
o le plieguen las alas. Los pjaros deben volar. Enjaular un ave implica una crueldad insoportable contra los
designios de la Naturaleza.
Igualmente, a pesar de ser un hombre cuya actitud esencial y cuya esencia astrolgica apuntan hacia la
soltera, el Virgo es capaz, cuando quiere, de acomodarse con inesperado buen talante a la rutina del
matrimonio o de la vida en comn con la mujer que ama. Aunque es bsicamente un solitario, y le disgusta
compartir todos sus pensamientos con una compaera, Virgo pertenece al elemento Tierra, y la Tierra
permanece donde fue colocada por la Naturaleza, a menos que un cataclismo o un tornado le arranque terrones. Pero acaso la Tierra tiene la culpa de ello? All estaba, ocupndose estrictamente de lo suyo...
Hasta aqu me he referido a su relacin como si estuviera consolidada en el matrimonio, porque la mayora de
los Virgo se sienten incmodos cuando conviven con una mujer sin la bendicin eclesistica. No todos. La
mayora. Sin embargo, normalmente a los Gminis no les resulta difcil aprobar y defender el amor libre o el
matrimonio libre. Gminis es un fantico partidario de todo lo que incluya la palabra libre. Por tanto, una
vez que ambos hayan experimentado el magnetismo qumico que los incita a unirse, es posible que la primera
controversia gire en torno de si se casarn o no.
Dentro de los lmites indispensables del amor o el matrimonio, as como en los de la relacin con un socio
comercial, el hombre Virgo generalmente no trata de dominar. Tiende a ser impecablemente formal respecto
de su amoro o matrimonio, y a menos que tenga un horscopo excepcionalmente mal aspectado en el
plano emocional, ser un excelente compaero en lo que concierne a los pequeos bienestares y
convencionalismos: recordar puntual y diligentemente los cumpleaos y aniversarios, vaciar el recipiente de

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excrementos del gato y cuidar que no se quede sin vitaminas. Por supuesto, la mayora de las chicas Gminis
preferiran que sus cumpleaos y aniversarios se festejaran, como de costumbre, mediante el recuerdo
apasionado o sentimental, y no mediante tildes peridicos con lpiz rojo en una agenda. Pero, quin es ella
para quejarse? Ciertamente las fechas no son su punto fuerte, y es posible que de cuando en cuando se
confunda y le enve a l una tarjeta para desearle una pronta mejora con motivo del cumpleaos de su madre,
o que le haga un regalo de aniversario de bodas en la fecha en que compraron la casa... y ya que hablamos de
casa, si la compran, l ser quien sugerir la idea en primer trmino, nueve veces de cada diez. En el dcimo
caso, si es ella quien inicia la consulta con un agente de propiedades, verificad su signo lunar o ascendente.
Probablemente uno de los dos, o ambos, estn en el elemento Tierra. A la chica Gminis tpica le gustan
bastante las casas, pero prefiere los apartamentos, porque es posible cambiarlos peridicamente. Digamos
cada pocos meses. No hace falta aclarar que normalmente a los hombres Virgo no les parece viable ni prctico
este juego de mudanzas. Vale la pena recordar que el espritu prctico por defecto o por exceso ser la
autntica causa subyacente de muchas de sus reyertas. l lo tiene en exceso, para el gusto de ella, y a ella le
falta, para el gusto de l, si son, respectivamente, un Virgo tpico y una Gminis tpica.
En cuanto a su compatibilidad sexual, el Virgo puede ser, con toda su innata dulzura, cortesa, consideracin y
puntualidad, un amante o marido imposible para una mujer temperamental. Por supuesto, no todas las
Gminis son temperamentales. O mejor dicho, es posible que una de las personalidades gemelas sea
emocionalmente temperamental, y que la otra sea despegada. Los hombres Virgo, veris, no son
exageradamente emocionales. El Virgo medio tampoco es demasiado afectuoso. La leyenda afirma que
Narciso era un Virgo, perdidamente enamorado de su propia imagen. Yo creo, personalmente, que Narciso era
Leo, pero aparte de ello, es cierto que a los hombres Virgo se los acusa a menudo de ser fros y egocntricos.
(Leo puede ser egocntrico, pero nunca fro.)
Si el secreto espiritual ms profundo del sexo consiste en la entrega recproca de la personalidad a la otra
parte, que culmina en una fusin de mentes, almas y cuerpos en una unidad perfecta (y en verdad lo es), el
Virgo tpico an no ha terminado de asimilar este misterio esotrico. A menos que se le inculque cuidadosa y
tiernamente, o a menos que haya tenido una temprana enamorada Escorpin, es posible que se le escape
durante muchos aos, y quiz durante toda la vida. l rehye inconscientemente el concepto de entrega total,
tal como rehye a la idea de usar un ungento Vicks ajeno. Conozco a una mujer Gminis (esto no es una
fbula) que me cont una vez que su marido Virgo insista en rotular los dos potes de ungento Vicks que
haba en el botiqun con las etiquetas L y ELLA. A casi todos los Virgo los asust en el seno materno un
germen maligno (y tambin a bastantes Acuario).
Este hombre no slo recela de la entrega, sexual o de otro tipo, sino que tampoco se complace demasiado en
el paso inicial de la conquista... de modo que es posible que no se entusiasme l ni entusiasme a los dems.
Esto puede no caerle bien a una mujer Aries. Leo o Escorpin, pero podra ser la razn por la cual las
Gemelas se enamoran de l desde el primer momento. No todas las chicas Gminis, pero s la mayora, se
sienten ms seguras, dentro o fuera del matrimonio, y se den cuenta o no de ello, cuando pueden jugar al amor
como si fuera una farsa. El amor de Gminis es voltil y ligero, delicadamente etreo. Como el hombre Virgo
est magnficamente dotado para el arte de hacer el amor con ligereza, l puede triunfar con ella donde otros
han fracasado por negarse a participar en el juego de la simulacin.
Por instinto, ella puede sentirse emocionalmente a salvo con este hombre, y ambos pueden
suministrarse recprocamente una sensacin de seguridad que constituye el cimiento para el posterior
desarrollo de una profunda pasin, que tal vez nunca habra florecido en ella con un hombre ms serio en el
aspecto sexual, o con una mujer ms apasionadamente exigente, hablando desde el punto de vista de l. Es
posible que a ella la desconcierten un poco algunos hbitos de l, como el de ducharse inmediatamente antes y
despus de su contacto fsico... pero a l tambin podra resultarle bastante deprimente y desalentador el
hecho de que ella tenga la costumbre de interrumpir el beso de las buenas noches, o los prolegmenos de un
abrazo de unin ntima, con la descripcin de un sueo extrao que tuvo la semana anterior. Ninguno de los
dos quedar totalmente destruido, en el plano emocional, Si esto determinara el aplazamiento del beso o el
abrazo hasta la maana siguiente.
S, tendrn pequeas diferencias. La mayora de las chicas Gminis se complacen en dormir hasta tarde y
estn sujetas a ataques peridicos de insomnio. Los hombres Virgo tambin sufren de insomnio, cuando los
preocupa algo. cosa que sucede con frecuencia... pero este hombre preferir que lo sorprendan luciendo
vaqueros con flores rojas y purpreas antes que dejar que lo encuentren durmiendo hasta medioda; y
aclaremos que estas dos opciones son pecados ms o menos mortales para el Virgen. Si se trata de uno de los

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Virgo que insisten en tener un hogar pulcro y en sentarse a la mesa puntualmente, no tardar en descubrir que
esta chica no ve la necesidad de alcanzar la perfeccin absoluta en estos dos contextos. Ciertamente es capaz
de comportarse como una anfitriona exquisita (aunque ser raro que l invite a alguien a casa para que ella
demuestre sus dotes de anfitriona) y, cuando quiere, puede crear una deliciosa atmsfera hogarea. Pero es
dudoso que friegue los pisos con verdadero entusiasmo y pasin, y si fuma (rogad que no!) posiblemente
habr ms de un cenicero sucio en la casa. Esto no lo pondr eufrico, porque para empezar la mayora de los
Virgo detestan el cigarrillo, y aborrecen lisa y llanamente el olor desagradable de los ceniceros repletos.
Lo sorprendente, empero, es que las habituales irritaciones minsculas de todos los das no generen
grandes reyertas entre ellos. El hombre Virgo no pide realmente mucho del amor ni del matrimonio, excepto
tal vez disponer de su propio pote de ungento Vicks. Y lo mismo vale para ella. Por supuesto, l agradecer
un poco de puntualidad en las comidas, y por lo menos una apariencia de lealtad. Pero, en general, la chica
Gminis es suficientemente adaptable como para poder acomodarse a estas condiciones que desesperaran a
otras mujeres, y l es suficientemente prctico como para no pretender que el amor y el matrimonio se
desarrollen en el cielo o en el infierno, sino en un lugar intermedio. A menos que existan serios antagonismos
planetarios entre sus respectivas cartas natales, probablemente estos dos no sern demasiado cargosos el uno
con el otro, cuando se los compara con otras combinaciones de signos solares.
Los rpidos cambios de personalidad y los mltiples estados de nimo de ella podran desconcertarlo y
fastidiarlo. Los taciturnos trances de introspeccin de l, durante los cuales se niega a comunicarse, podran
desencadenar en ella muchas borrascas instantneas, que normalmente se disiparn enseguida. Hay momentos
en que l la har llorar de hasto, y en que ella lo ofuscar hasta indigestarlo, y tambin es posible que su vida
en comn sea una larga partida adivinatoria de ajedrez verbal y de jai alai emocional. Sin embargo, es
igualmente posible que ella le suministre la excitacin y el estmulo vital que este hombre tanto anhela y
necesita, y que l le proporcione la estabilidad de miras que ella busca, aunque sin saberlo.
Gminis es Aire, Virgo es Tierra, y estos dos elementos tienen poco en comn. Pero se trata de una
configuracin de signos solares 4-10, y en consecuencia es posible que el respeto mutuo sea el imn que los
atrae el uno hacia el otro, en tanto que el deber o algn tipo de responsabilidad, familiar o profesional, los
mantiene unidos.
El hombre Virgo es ms veraz, e incluso ms honesto, bsicamente, que los Arqueros. A su juicio, la
veracidad ahorra muchos contratiempos. Su abuela acostumbraba a canturrear: Ay, qu telaraa ms
embrollada tejemos cuando empezamos a mentir, y ya entonces l decidi que el embuste era un lastre
innecesario. No quiere enredarse por nada del mundo en ningn tipo de telaraa. Y menos an tejida por l.
En consecuencia, el Virgo tpico pondr sobre la mesa la verdad descarnada de cualquier situacin, sin
subterfugios. ste no es el comportamiento ideal para ganar estima, pero uno de sus rasgos ms admirables
consiste en que le importa poco ganar la estima de todos: slo ambiciona la de unos pocos amigos ntimos. Si
stos lo quieren, y si l puede servirles a su leal saber y entender, se da por satisfecho. No necesita ganar
competiciones de popularidad para sentirse conforme con el estado general de las cosas y para disfrutar de lo
mejor de la vida. En verdad, a menudo disfruta de mucho ms que lo mejor de la vida y del amor cuando
lo tratan afable, dulcemente, y no lo envuelven en torbellinos de emocin que ahuyentan su simpata
silenciosa y sus bellos modales y los hacen replegar en una caverna excavada por l mismo para eludir
conflictos. Sin embargo, cuando los conflictos no son emocionales, l seguir adelante y raramente se apartar
del rumbo que considera justo.
El camino del Virgo casi nunca est sembrado de flores, y l tampoco se detiene en el trayecto para
cosechar ramilletes de halagos por sus servicios. Igualmente, su corazn se aligerar y su espritu se iluminar
si deja que una chica Gminis dance junto a l y colme esos momentos de soledad con su risa maravillosa, y
con su arte para capturar la brisa entre las manos y para verter en su voz la meloda de un fresco arroyo del
bosque, aunque slo est diciendo: Buenos das, cario. La palabra imposible no existe para ella. Si algo
no se puede lograr de una manera, ella idear otro sistema, mejor. A l, este talento le resultar
estupendamente til. La chica Gminis es incorregible, irrefrenable... pero tambin irresistible. Con un
intercambio luminario armonioso entre sus horscopos, tal vez podrn encontrar en sus respectivas sonrisas
un territorio familiar, y la aventura de explorarlo juntos ser prodigiosa.
Pero las Gminis son gemelas, a veces incluso trillizas. Y al hombre Virgo ya le resulta bastante difcil
lidiar con una sola mujer. No naci con aptitudes para manejar un harn, o a una pareja con personalidad
mltiple. Para alcanzar la dicha junto a l, la chica Gminis deber decidir primeramente cul es su verdadera
personalidad, y despus deber pertenecerle eterna, indivisiblemente.

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Hombre GMINIS Mujer VIRGO


... y entonces Wendy, a quien siempre la haba gustado hacer las cosas correctamente, le
pregunt a Peter cuntos aos tena. En realidad no fue una pregunta afortunada, sino
algo parecido a un cuestionario de examen que te formula preguntas sobre gramtica
cuando quieres que te interroguen sobre los Reyes de Inglaterra.

sta no es una relacin amorosa que se rodear inmediatamente de nubes de arco iris cortinas de flores,
porque los dos enfrentan la difcil prueba de la influencia de la configuracin de signos solares 4-10, con sus
dificultades y sus ventajas, que pueden ser, las unas y las otras, considerables. Tienen que roturar un terreno
romntico escabroso. Esto no significa que no podrn cultivar coles juntos, pero s que debern escardar a
menudo su huerto de amor.
Tal vez empiecen por disputar si plantarn rosas u hortalizas. Obviamente, es ms lgico optar por las
hortalizas. Ella es Virgo, as que la preocupan la posibilidad de una hambruna mundial, las termitas de la
buhardilla, la inflacin._ y el botn que falta en la camisa de l.
Evidentemente las hortalizas son el remedio. No para la camisa ni las termitas, quiz, pero s para la
inflacin y el espectro de la hambruna. Qu puedes hacer con una rosa, cuando el lobo llama a tu puerta?
Olerla. Puedes olerla. El hombre Gminis puede inhalar la fragancia de una rosa mientras se cierne la
pobreza, ms o menos como Nern tocaba la lira mientras arda Roma. Por supuesto, toda esta divagacin
sobre horticultura es simplemente simblica, como la melomana de Nern entre las llamas. Pero por otro
lado todo es simblico, acadmico o retrico para Gminis. ste naci envuelto en charadas, berreando
metforas y anagramas, y fajado con analogas. Adems, con un telfono en una mano y un telegrama en la
otra. A ratos l pensar que a ella la engendr una unin improbable entre una computadora y un estropajo.
Una computadora autoprogramada. (Existe semejante artefacto? No importa, algn Virgo con ascendente
Acuario lo inventar, trabajando en colaboracin con un Gminis.)
Con esto no quiero dar a entender que este hombre y esta mujer no se sentirn mutuamente fascinados,
sino que tambin se sentirn mutuamente frustrados. La mayora de los hombres Gminis han olvidado su
fecha de nacimiento, inocente o deliberadamente, cuando llegan aproximadamente a los veintin aos en el
ilusorio calendario cronolgico. Por el contrario, muchas chicas Virgo han grabado en su memoria la hora, el
minuto y el segundo exactos de su nacimiento, y adems, piensan que la juventud eterna no slo es imposible
sino que adems sera aburrida. A l le parece al mismo tiempo posible y encantadora. Ya veis que los
relojes, los cronmetros y la teora de la relatividad de Einstein pueden crear uno de los abismos que los
separan. Por supuesto, hay otros.
Es rara la mujer Virgo a la que le seduce la idea de arrojar una pluma al aire y enderezar en la direccin
que seala al caer. La Virgen tpica no es aficionada a la rayuela geogrfica. Cuando viaja, prefiere utilizar un
folleto de turismo, un agente de viajes, y el plan de descuentos familiares para el fin de semana. Las
compaas de aviacin inventaron precisamente para las Virgo los vuelos supereconmicos (entre las dos y
las seis de la maana), cuando todo el mundo duerme, porque esta mujer es sensible al ahorro. En cuanto a los
Gemelos, al hombre Gminis de la mujer Virgo le gustara, secretamente, guiarse por la pluma, y en cuanto al
sistema de viaje, es a l a quien estn dirigidos los carteles que dicen desayune en Londres y almuerce en
Italia.
Apenas se enamoren, a menudo por curiosidad mutua, a ella la entusiasmarn las posibilidades de la vida
informal y despreocupada que l avala tan seductoramente, mientras que l se sentir halagado por la atencin
arrobada, la mente alerta y los modales muy femeninos de ella. Pero despus de un tiempo, es posible que ella
empiece a preguntarse si es prudente sincronizar su vida con la de un hombre que parece deambular
eternamente ya sea en el plano fsico, en el mental o el emocional y cuyos pensamientos y acciones no
son ms previsibles que el estado del tiempo. Es posible que ms adelante Gminis intuya que la atencin de
Virgo est hasta cierto punto excesivamente arrobada, que su mente est quiz tan alerta que no le permite
disfrutar a l de vez en cuando de la intimidad indispensable para entregarse a sus reflexiones abstractas. Es
posible que entonces se entable la controversia de las rosas y las hortalizas, simblicamente. Todas las
reyertas entre enamorados se originan en cuestiones que por s mismas carecen de importancia pero que han
sido elegidas porque simbolizan los problemas arraigados y reales que son la autntica causa de su tensin
recproca... una verdad subyacente que ninguno de los dos quiere enfrentar, por una razn cualquiera.
A pesar de su inteligencia analtica, tajante, la chica Virgo es ultrasensible y necesita estima. Es posible

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que el hombre Gminis sea un poco incompetente en este contexto, porque el suyo es un signo de Aire.
Aunque los signos de Aire no son incomprensivos, irradian un cierto desapego y una frialdad altanera que
pueden dejar a un Signo de Tierra como Virgo con una sensacin de vaco, de relativa frustracin. Habr
momentos en que l ser verdaderamente incapaz de entender la profundidad y la fuerza de ella. Entonces l
intentar discutir y llegar a una transaccin, a menudo sin conseguir llegar a la causa del problema. An as, la
destreza intelectual y la simpata de l, combinadas, bastarn para apaciguarla temporalmente, hasta que ella
tenga tiempo de analizar los errores y defectos inherentes a la gil argumentacin de Gminis.
Si ella no lo toma demasiado en serio, su relacin puede ser excitante desde el punto de vista intelectual,
estimulante desde el punto de vista emocional, y muy divertida. Pero Virgo lo toma todo en serio, y
ciertamente no har una excepcin con su amante o marido. Quizs l debera tomarla a ella ms en serio. A
menudo las Virgo dan la impresin de haberse comprometido hasta que la muerte nos separe, y despus
traumatizan a su pareja con una demanda de divorcio tan diestra y rpida (y tan cruel) como la decapitacin
de una flor. Casi todo lo que hace Virgo es diestro y rpido. En esto, los dos son muy parecidos. Ambos
pueden impacientarse con la rutina, y ninguno de los dos es desaliado en el pensar ni en el vestir.
En lo sexual, ella necesita ms demostraciones fsicas de afecto que l, y l necesita ms variacin y poesa
que ella en el acto amoroso. No se trata de que Gminis pretenda que Virgo duerma con un ejemplar de las
poesas de Rossetti bajo el brazo, ni de que ella aspire a que l la conquiste como Valentino, pero es
indiscutible que existen diferencias sutiles en sus maneras de abordar la alquimia fsica del amor. La chica
Virgo no desea necesariamente que el hombre que ama la trate como si fuera Virgen. Es cierto que la
sexualidad de ella, en conjunto, no es dramticamente fogosa ni excesivamente apasionada, pero lo que s
quiere es saber que l est all. Y no slo la mente, el corazn y el alma de l, sino todo l. Aunque las
mujeres Virgo, como los hombres Virgo, pueden tomar el amor sexual a la ligera, son un poco ms terrenales
al respecto que el etreo Gminis. Adems, esta chica se siente ms confiada y distendida, y por consiguiente
puede ser una compaera ms satisfactoria para el amor, si capta una dosis de seguridad y familiaridad en su
relacin ntima. Esto no es siempre posible en compaa de un Gminis, que, por si acaso lo hemos olvidado,
contiene dos personas en una (a veces tres o cuatro), y es tan cambiante como para proyectar su deseo una
noche y una fra indiferencia la noche siguiente.
Semejante comportamiento puede producirle a la chica Virgo un trauma de silenciosa desesperacin,
y har que achaque estos altibajos del ardor de l a un defecto suyo. Los Virgo pueden ser implacables con los
dems, pero siempre lo son ms consigo mismos. Siempre habr algo que permanecer tcito, en reserva,
entre estos dos. Raramente lograrn la entrega y el olvido total de sus personalidades en la unin sexual, y por
tanto su compatibilidad fsica, si bien podr ser inmensamente satisfactoria en algunos sentidos, tal vez ser
un poco reservada y controlada desde el punto de vista emocional.
Sin embargo, en el mbito mental, no se ocultarn casi nada. De ninguno de los dos se puede decir que sea
circunspecto en lo que al lenguaje se refiere. Algunas parejas Gminis-Virgo utilizan las palabras como
armas, con puntera letal. Las palabras hieren. Pero las palabras tambin curan, y estos dos signos solares
pueden usarlas para bien o para mal. Nadie puede estimular tiernamente a una Virgen tmida para trasmutar su
estricta reserva en el floreciente jardn de rosas de la confianza en s misma, con mayor pericia y delicadeza
que un hombre Gminis... y nadie puede sosegar los nervios frecuentemente alterados de este hombre,
mercurial con ms dulzura y sagacidad que una chica Virgen, cuando ambos actan motivados por el amor.
Claro que probablemente respetarn sus respectivas aptitudes mentales, pero es posible que sofoquen
demasiado a menudo sus manifestaciones francas, de afecto. Quiz ni l ni ella comprendan que es necesario
que la relacin emocional sea profunda. Ella cumplir con todos los deberes indispensables para con l, sin
descuidar ningn detalle. Le coser los botones cados, y le suministrar excelentes consejos respecto de su
carrera, siempre y cuando l se los pida, porque pocas veces o nunca le enunciar sus opiniones sin invitacin
previa. Ser una compaera estimulante en el teatro o frente al televisor, y podr conversar muy
inteligentemente con l acerca de los libros, revistas y peridicos que lean. Igualmente, en su devocin,
aunque estable y admirable, quiz habr una pizca de deber.
l encontrar tiempo para conversar con ella acerca de todas las cosas que la preocupan, probablemente la
alentar a discutir todo aquello que se le cruce por la cabeza, y le conceder un amplio margen para
desarrollar libremente sus propias ideas, sus ideales y sus objetivos. No la sofocar con un exceso de celos o
de espritu posesivo, pero quiz la haga sentir acorralada con sus averiguaciones y sondeos, a veces
exagerados, en el plano verbal.
Una vez mitigado el primer fulgor del romance, es posible que la mujer Virgo empie- ce a acusarlo de
dispersar excesivamente su energa mental. Ella tambin tiene sed de conocimientos, pero no es propensa a

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desperdigarse y puede pensar que l se limita a buscar vidamente excitaciones y novedades continuas.
Adems, es posible que no comparta el entusiasmo de l por las excursiones y los viajes.
La mayora de las Virgo tienen una extraa empata por los nios, y digo extraa porque ellas mismas son
tan adultas en todos los sentidos. Pero los nios siempre hacen aflorar el potencial latente de la mujer Virgo
para la amabilidad y la belleza, un talento insospechado para el desarrollo de la imaginacin, y una inmensa
ternura: la capacidad para escuchar con verdadero inters todas las angustias y alegras de una mente joven,
sumada a la sagacidad necesaria para orientarla delicadamente hacia nuevas corrientes de pensamiento.
Puesto que todo hombre Gminis es, en su corazn, un nio, un chiquillo, estas cualidades intrnsecas de ella
no pueden hacer menos que atraerlo inmensamente. Sin embargo, cuando se trata de l, ella deber ocuparse
no slo de un nio, sino de los Gemelos. Es posible que, a menudo, ella intente ensearle el valor del
discernimiento, y descubra que a l no le interesa realmente discernir. A su vez, es posible que l intente
ensearle a ser ms franca, ms expansiva, a valorar la libertad personal, y a adquirir el don de correr
impulsivamente en pos de un sueo. Pero los Virgo se abren muy lentamente, como una puerta chirriante, y l
siempre tiene una prisa tremenda. Adems, a juicio de ella, la libertad nunca ser tan valiosa como la
seguridad. A la inversa, para Gminis, la seguridad es a menudo sinnimo de un presidio mental, que
restringe toda posibilidad de cambiar los planes. Y a juicio de l esta posibilidad es la que hace a la vida digna
de ser vivida.
La mujer Virgo pertenece a la categora de las que le dan al amante o marido la sorpresa de servirle el
desayuno en la cama, pero, lamentablemente, son pocos los hombres Gminis a los que les gusta dormir hasta
tarde. Es ms probable que l salte de la cama, se duche y pedalee o corra unas cuantas veces alrededor de la
manzana, o lea los titulares del peridico de la maana, antes de pensar en algo as como las tostadas o los
cereales. Es posible que su reaccin seca o indiferente ante las amabilidades de ella la ofendan ms de lo que
l sospecha. Como su mente regida por Mercurio es muy analtica, el hombre Gminis que tiene la suerte de
ser amado por una Virgen tambin regida por Mercurio (hasta que aparezca Vulcano), deber analizar la
autntica naturaleza de ella con ms minuciosidad, si desea conservarla.
Algunas mujeres Virgo se mantienen castas e indiferentes al romance durante aos, y entonces lo arriesgan
todo en aras de una pasin nica, inesperada e irrealizable, que no tarda en extinguirse. De modo que es
posible que, en verdad y por dentro, ella no sea tan fra y controlada, en el plano emocional, como a veces
parece serlo. Es igualmente posible que el autntico amor se le escape al' hombre Gminis hasta que deje de
ser Peter Pan, y hasta que Wendy haya llegado a la edad de casarse con algn otro, o sea con alguien que
demostr ms inters por ella que por sus propias aventuras.
Estos tristes desencantos pueden determinar que tanto Virgo como Gminis cavilen a solas,
atormentndose con aoranzas y lamentaciones. O pueden determinar que entablen una relacin mutua
serena, segura y despejada de exigencias, que podra ser precisamente lo que ambos han estado buscando.
Claro que para ello tendrn que mirarse durante un poco ms de tiempo a los ojos. En cambio, es posible que
eviten escudriarse de frente, por el temor a que sus ojos revelen demasiado, mientras ella barre los suelos... y
l deambula por la casa, silbando su cancin infantil... tanteando ambos con sus corazones, pero igualmente
incapaces de expresar con franqueza lo que sienten.
Es inevitable que entre stos dos exista una cierta dosis de tensin e incomprensin, porque sus soles
natales estaban en cuadratura cuando nacieron. En la electrnica del amor, la tensin puede producir un
cortocircuito de las emociones, reducindolas a la oscuridad silenciosa. Pero con un intercambio Sol-Luna
armonioso entre sus horscopos, este hombre y esta mujer podrn alcanzar, mediante su unin, un afecto y
una satisfaccin perdurables. Es posible que nunca se trate del xtasis turbulento y exaltado que vivieron
Scarlett y Rhett, pero el amor no tiene por qu ser siempre explosivo.
A veces, la dicha puede consistir en un trance apacible y sereno, en un momento de reposo en el viento, que
convierte la puesta de sol en algo menos triste y obsesivo... y que ilumina la aurora con una tierna promesa.

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GMINIS

LIBRA

Aire - Mutable - Positivo


Regido por Mercurio
Smbolo: los Gemelos
Fuerzas diurnas Masculino

Aire - Cardinal - Positivo


Regido por Venus
Smbolo: la Balanza
Fuerzas diurnas - Masculino

La relacin GMINIS-LIBRA
A veces estaba oscuro y a veces claro, y entonces tenan mucho fro y luego demasiado calor.

Es entretenido contemplar a dos signos de Aire, como si fueran trapecistas en el circo. Sus acrobacias
mentales pueden ser deslumbrantes y vertiginosas. El aire es intangible, invisible, siempre se mueve por todas
partes... y por ninguna.
Como los Libra nunca pueden tomar una decisin y los Gminis cambian continuamente de idea, es difcil
predecir qu suceder en una asociacin entre estos dos, ya se trate de parientes, cnyuges, amigos, socios,
amantes, compaeros o lo que sea. Lo que yo escriba puede modificarse antes de que cualquiera de ellos lo
lea o lo entienda. Pero me arriesgar a afirmar que Gminis y Libra componen una configuracin de signos
solares 5-9, que generalmente se equilibra favorablemente, cualquiera que sea la direccin en que se incline la
Balanza de Libra, y cualquiera que sea la personalidad gemela de la doble naturaleza de Gminis que opte por
entablar la discusin.
Para que los Gminis ms espabilados, alertas, calculadores y semejantes a los pjaros no crean que los Libra
son slo vaporosas nubes blancas, les recordar que Libra rige a China, y por tanto a los chinos. Como los
orientales son los seres ms misteriosos del planeta, es errado deducir que detrs de la sonrisa rutilante de
Libra no hay ms que una blanda masa gelatinosa. Desde luego, esto no intimidar a los Gminis tpicos (que
son expertos en resolver enigmas chinos). As que tratar de prevenir a los Gemelos de otra manera. Libra es
un signo de Aire cardinal. Gminis es un signo de Aire mutable. Cardinal es sinnimo de liderazgo. Mutable
es sinnimo de comunicacin. Un Gminis puede comunicarse estupendamente con un Libra por las ondas
areas mientras l o ella no intente controlar la discusin ni ganarla.
Recordad, Libra es cardinal. Libra debe triunfar. Libra debe gobernar. Libra es lgico. Libra siempre debe
tener razn. Y no dejis que esa sonrisa carirredonda, con unos adorables hoyuelos en el mentn, y en otras
partes, os induzca a pensar otra cosa. No son ms que armas que ayudan a los Libra a salirse con la suya.
Cuando no pueden lograrlo con su intelecto superior, con su proceso lgico deductivo, o con esa voz untuosa
que suena como violines combinados con arpas y acompaados por ngeles susurrantes, agitarn las pestaas
de esos ojos grandes e inocentes, irradiarn la sonrisa de Venus, ahuecarn unas cuantas veces sus hoyuelos...
y el adversario se derretir, sencillamente.
Quin puede resistirse a semejante amalgama de belleza, gracia, encanto, lgica, inteligencia, sagacidad
y halago? Gminis puede... y a menudo lo hace. Gminis no se deja atrapar fcilmente por las marrulleras
estratagemas de Libra. Al fin y al cabo, Gminis invent el arte de persuadir, timar, engatusar y embaucar a
los tmidos, con una mezcla de simpata e ingenio. En la rueda del Zodiaco, Libra est despus de los Gemelos, as que Gminis invent el juego y Libra se limita a imitar.
Estoy segura de que todos los Gminis concordarn conmigo. En cuanto a los Libra, no tengo la intencin
de discutir el tema con ellos, de adelante atrs y de arriba abajo. En cambio, exhortar tiernamente a los
inocentes Libra a ser pacientes conmigo a medida que me enredo y me embrollo verbalmente, tratando de
identificar las diferencias que los separan de los Gemelos.
El aire no tiene forma especfica. Simplemente flota por el espacio, como un fantasma que todo lo penetra.

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Por tanto, cuando estos dos signos solares se unen en el hogar, en la oficina, en el campus universitario o
donde sea, al principio puede resultar difcil verlos. Pero no orlos.
Gminis y Libra entablarn largas discusiones sobre todos los temas imaginables, y ambos tienen una
imaginacin desmedida. Unas veces las discusiones sern cordiales, y otras no. Pero generalmente no llegarn
al extremo de dejar de hablarse el uno al otro, porque a ambos les resulta prcticamente imposible permanecer
callados por un lapso poco ms que insignificante. A los dos les gusta hablar. A ninguno le gusta escuchar.
El smbolo de Libra es la Balanza porque algunos Libra tienen el intelecto tan delicadamente ajustado que
apenas se les ocurre una idea, nace automticamente otra de signo contrario. Imaginis lo que es cargar con
la maldicin de semejante mentalidad? Alguien dice CALIENTE, y la tarjeta de la computadora responde
FRO. Alguien suelta LARGO, y contestis CORTO. Si OS VELOZ, instantneamente pensis LENTO. Si
OS LENTO, pensis VELOZ. Si os sents ARRIBA, miris ABAJO. Si os sents ABAJO, miris ARRIBA.
An estis all? Sentaos y cerrad los ojos por un momento. Se os pasar el vrtigo. Ahora entendis por qu
tantos Libra andan por el mundo con una expresin de aturdimiento en sus rasgos bellos, bien compaginados,
y con una mirada lejana en sus hermosos ojos... durante la mitad del da? Durante la otra mitad su talante es
exactamente el contrario: os miran sagaz y fijamente, agitando su esencia area en un torbellino, o
pronunciando discursos elocuentes, apasionados. As van (y vienen!) estas almas pendulares. Suceda lo que
sucediere, inmediatamente deben acentuar lo opuesto.
En Colorado vive un hombre Libra llamado George. Un da le estaba explicando ciertas alternativas de mi
vida en virtud de las cuales yo sospechaba que recaa sobre m la desaprobacin de un organismo oficial ojal
ya abolido, que me haba hostigado sutilmente durante casi tres aos. l escuch mi breve sntesis, y entonces
ahuec sus hoyuelos y dijo: No dudo que los acontecimientos que se han producido en tu vida durante los
ltimos aos tienen una base siniestra asentada sobre hechos demostrables. Sin embargo, por otro lado, eres
escritora, y tienes una imaginacin vvida, as que es muy posible que en realidad todo sea algo absolutamente
inocente.
El Libra George ni siquiera tena conciencia de su propio proceso lgico. Ahora que estis iniciados en la
astrologa y sabis cmo funciona la mente de Libra, podris apreciar cmo apenas aflor en su cabeza la
palabra siniestro, su Balanza de Libra despidi una tarjeta que rezaba inocente: el antnimo exacto de
siniestro. ste es el dilema habitual de Libra. Cul es la verdad? Qu palabra dar la respuesta
definitiva? Siniestro? Inocente? El trauma de la indecisin.
Puesto que soy un signo de Sol Aries, este dilema especfico me result muy fcil de elucidar. Siniestro.
Los incidentes se asentaban sobre una situacin SINIESTRA. Sin embargo, como veris, en mi condicin de
Carnero, al saber que dichos incidentes han quedado atrs, los he arrojado al cubo de los desperdicios de ayer
y ya no me preocupo. Los Gminis hacen lo mismo. Arrojan el ayer por la borda, disfrutan del presente, y no
reconocen el futuro hasta que lo tienen encima. Libra no puede proceder as. Y si la sntesis fue errada?
Claro que pudo ser correcta. Pero si fue errada, y la arroj por la borda, cmo podr recuperarla para
enmendarla? Siniestro o inocente? Malo o bueno? Real o imaginaro? Positivo o negativo? Polaridades,
polaridades, polaridades! Libra est sumido en ellas desde la maana hasta la noche, y no se atreve a
desecharlas, porque teme desechar la nica conclusin justa.
A diferencia de los Libra, Gminis hace malabarismos con las polaridades y las contradicciones, no sucesiva
sino simultneamente, sincronizando constantemente sus ideas duales entre sus personalidades gemelas. Por
qu no? Siempre tiene dos componentes para manejarlo todo. Ya veis por qu las personas de estos dos signos
solares no son las ms fiables del mundo. Si pillis a un Libra cuando la Balanza est perfectamente equilibrada, estupendo! Si pillis a un Gminis cuando ha puesto a dormir a uno de los dos Gemelos y por el
momento slo exhibe al otro, estupendo! Pero la mayora de las veces, estos dos, o tres, o cuatro, forman una
multitud. No obstante las similitudes que existen entre las naturalezas de estos dos signos de Aire, tambin
hay muchos casos en los que viran en direcciones distintas. Por ejemplo cuando se trata de tomar decisiones.
Gminis se decide en un santiamn, y basta. Sin lamentaciones, ni ansiedad, ni esperas, ni dudas. Actuar
AHORA. Libra equilibra, sopesa, juzga, cavila, duda, asimila y aplaza la accin hasta maana... y a veces el
maana no llega nunca. A juicio de Gminis, la falta de decisin puede hacer perder la carrera. A juicio de
Libra, la toma de la decisin puede provocar un error tremendo, y Libra no puede, no quiere cometer un error.
Sin embargo, debemos destacar que el hecho de que el veloz Gminis regido por Mercurio haya tomado una
decisin puede estar totalmente desprovisto de importancia. Es posible que al cabo de pocos minutos cambie
de idea y de planes. Pero una vez que Libra se ha decidido finalmente, despus del delicado proceso de

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evaluacin, lo normal es que se cia estrictamente a lo resuelto, seguro de que no hay correcciones posibles
que no hayan sido sopesadas ya con el mayor cuidado. Libra es ms cauto que Gminis. Mientras los
Gemelos tienden a cortar amarras deprisa, Libra nunca es partidario de cortar lo que se puede desenredar con
ms prudencia, hebra por hebra. Por qu apresurarse, cuando es posible que despus descubras que omitiste
tomar en cuenta uno u otro dato previamente desconocido, y que ello te obligue a dar marcha atrs?
A los Gminis les encantan los desafos intelectuales, y los Libra se los suministran. Pero cuando los Gemelos
ensayan con Libra los equvocos mercuriales, no siempre salen adelante. Pueden quedar ms o menos en el
medio, y de cuando en cuando incluso un poco por detrs del centro.
El carisma infantil de Gminis puede inducir a los Gemelos a hacer cosas muy extravagantes y mgicas,
como pronunciar veintisiete veces el nombre de un druida cuando cae una estrella... o acoplarse a viajes
imaginarios sobre el lomo de ardillas o saltamontes benvolos... y buscar diamantes entre las rosas que
florecen en la nieve. Normalmente los Libra no pierden tiempo en semejantes tonteras. Por contraste directo
con su dulzura optimista y sus rostros alegres y radiantes y sonrientes, son framente lgicos.
Pero ya estamos de nuevo en lo mismo! Cuando imaginis un rostro de Libra, os ser devuelto como su
opuesto por la mentalidad bipolar de la Balanza. Lo que buscan los Libra es el justo medio. A los Gminis les
importa un bledo el justo medio para llegar al equilibrio perfecto. Los Gemelos disfrutan del viaje, no del
lugar de destino. Tanto Gminis como Libra se sentiran ms dichosos consigo mismos, y el uno con el otro,
si intentaran sentir mucho ms y pensar mucho menos.

Mujer GMINIS Hombre LIBRA


Les permiten, empero, cambiar, pero eso s, el cambio debe ser total.

El hecho de que la mujer Gminis y el hombre Libra se parezcan tanto es lo que determina que sean tan
compatibles y tan felices juntos. Adems, el hecho de que la mujer Gminis y el hombre Libra se parezcan
tanto es lo que genera la mayora de los conflictos entre ellos.
Se conocen demasiado bien el uno al otro, comprenden sus respectivos ensueos o idiosincrasias, pueden
lidiar serenamente con sus respectivas cualidades camalenicas, entienden sus respectivos estados de nimo, y
generalmente se unen contra los extraos que no se explican la mentalidad etrea. Si l o ella tiene un
elemento Agua ms sensible y emocional o un elemento Tierra ms estable como signo lunar o ascendente, su
felicidad y su bienaventuranza estn prcticamente aseguradas desde el punto de vista astrolgico. De lo
contrario, stos dos siguen teniendo garantizada una probabilidad de xito mucho mayor que la media, si se
excepta la aparicin de pequeos remolinos en los das particularmente ventosos. Ambos pueden ser un poco
ventosos, cargados de brisas fras y de rfagas sofocantes. Por tratarse de una configuracin de signos solares
5-9, concuerdan ms armoniosamente que la mayora de las parejas que tratan de armar un cuadro perfecto
con las piezas del rompecabezas del amor.
Ambos tienen vocacin esttica, se sienten conmovidos por la belleza, y se sienten fuertemente alterados por
el desaseo, la fealdad y el desorden. Sin embargo, no obstante esta esencia comn, Gminis y Libra, al mismo
tiempo que necesitan, e incluso exigen, la belleza y el orden, tambin pueden necesitar a menudo una vivaz
criada Sagitario, una enrgica criada ariana, o una eficiente criada Virgo para que limpien lo que ellos han
ensuciado. Por supuesto, algunos Gminis y Libra son pulcros. Pero incluso ellos prefieren contar con otra
persona encargada de recomponer sus desbarajustes... tanto emocionales como literales. Como Gminis es
ms rpida, generalmente ser ella quien seguir por todas partes a su hombre Libra, recogiendo los calcetines
desechados y las cscaras de pltano. A cambio de ello, es probable que l no le niegue dinero (si lo tiene)
para hacer an ms confortable y bello su entorno. En la mayora de los casos, el nido de estos dos trtolos es
un lugar encantador, de buen gusto, agradable a la vista, y probablemente lleno de libros. Aunque vivan en
una tienda, sta se hallar bien sujeta y aislada, quiz con pirograbados en la lona a modo de decoracin, y un

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suave redoble de tambores como msica de fondo. Suave, he dicho. No demasiado molesto, porque Libra no
soporta los ruidos fuertes, los taburetes ladeados ni las estaquillas de la tienda torcidas.
Cuando este hombre y esta mujer rian, casi siempre ser ella la que iniciar la reyerta, y l quien le
pondr fin. Por lo menos, esto es lo que les parecer a los observadores. A pesar de su encanto etreo y su
delicada feminidad, la mujer Gminis tiene una lengua afilada, custica, y no se resiste a emplearla cuando
su mente gil la exhorta a enunciar sus opiniones rpidas. Su amante o marido Libra habr aprendido en los
comienzos de la vida que la grosera y la franqueza excesiva le dificultan la conquista de su autntico y
secreto objetivo, ya sea en el amor o los negocios. Por ello irradia una especie de delicada amabilidad (casi
siempre) y es un experto en ocultar sus pasiones e intenciones detrs de una sonrisa plcida y una voz
persuasiva. S, es posible que ella la haya iniciado verbalmente. Pero tal vez l sea el verdadero culpable, el
autntico instigador inicial de la reyerta... porque tard dos semanas en decidir si deberan tomarse sus vacaciones este mes o el siguiente, mientras ella ganaba tiempo ante la compaa de aviacin y la engatusaba para
que mantuviese las reservas de pasajes durante la temporada punta... o algo parecido. Por tanto, cualquiera
que sea el que inicia visiblemente el conflicto, l casi nunca es inocente.
El hombre Libra nunca es tan inocente como parece y dice, o como le gustara hacrnoslo creer. En
verdad, hay circunstancias (raras, pero las hay) en que su Balanza se descompensa, y puede ser tan chiflado
como un pajarillo atascado en la puerta de un reloj de cuco. Sin embargo, es probable que en estas ocasiones
se disculpe tan dulcemente, y que la abrume con una dosis tan abundante de la empalagosa simpata de Libra,
que ella olvidar a continuacin su mal carcter. Los extraos que contemplan los rasgos plcidos y
equilibrados del hombre Libra, no pueden imaginar las resoluciones dificultosamente articuladas que se
gestan en su cabeza, detrs de su fachada jovial, ni la ofuscacin con que trata a sus ntimos mientras
aqullas estn en la etapa formativa.
Es posible que a la chica Gminis se le ocurra ser diseadora de modas. Es posible que despus la deslumbre
la idea de conseguir una matrcula de vuelo y de comprar quiz su propio reactor Lear. A continuacin se le
puede antojar traducir del snscrito, estudiar los rollos del Mar Muerto, abrir una pajarera o inscribirse en la
facultad de Derecho. Pero el hombre Libra puede controlar todas las ideas y emociones embrolladas de esta
chica mejor que un hombre de un signo de Tierra, el cual tal vez entrar en erupcin como un volcn; que un
hombre de un signo de Fuego, que tal vez le quemar el oxgeno a su entusiasmo; o que un hombre de un
signo de Agua, que tal vez le sofocar dicho entusiasmo con una manta hmeda.
Libra entiende el instinto errabundo de la mente y el corazn de Gminis, y sin embargo es
suficientemente estable y lgico como para controlar los impulsos ms desatinados de ella antes de que stos
se hipertrofien, sealndole afablemente los pros y los contras, hasta inducirla a buscar su pjaro azul un
poco ms cerca del hogar... y de l.
La palabra apropiada es sosegante. Libra puede ejercer una influencia sosegante sobre Gminis, excepto en
aquellos ocasionales trances de enajenacin que despus l le hace olvidar con su seduccin. Dios sabe que la
chica Gminis necesita sosegarse. Tiene un espritu inquieto, un alma anhelante. Est conmovedoramente
ansiosa por saber qu es lo que desea, dnde est situada, quin es y por qu va... o viene. El hombre Libra es
el ms lgicamente indicado para explicarle todo esto. Pero... bueno, veris... la chica Gminis est compuesta
por muchos elementos: miel y especias y cosas hermosas, s. Sin embargo, es mucho ms que esto. Es todos
los libros que ha estudiado en su vida, el reflejo de las ideas y filosofas del Gemelo cuya imagen le devuelve
el espejo, y que por tanto son diametralmente opuestas a las suyas. Es la cuerda con la que salt a la comba en
su infancia, el graznido plaidero de las gaviotas, y los secretos que les susurr a las gallinetas en la playa por
donde se pase antao, el recuerdo de su primer baile... malezas que ruedan arrastradas por el viento y
tornados... las velas titilantes de una nochevieja parcialmente olvidada. Estos elementos de la chica Gminis
componen su mundo privado, por donde el hombre Libra que la ama nunca puede deambular libremente,
aunque la gue a travs de l... desde lejos.
En los equilibrados procesos lgicos de Libra hay, no obstante su encanto y dulzura, un elemento judicial
y fro que no le permite internarse en los espesos bosques del cambiante mundo mgico donde ella y su
Gemela residen tan a menudo. l puede contemplarla cariosamente, cuando se quita los zapatos y corre
descalza por la hierba, y puede esperar junto a la cancela hasta que vuelva de su remoto pas, pero nunca
puede unirse realmente a ella. Por qu? Porque tendra que situar a dicho pas en un mapa, verificar si hay
una lnea area que lleva all, averiguar su poblacin y estudiar su industria principal, antes de partir con ella.
De lo contrario, cmo podra demostrarse lgicamente a s mismo que semejante lugar existe de veras? Y si
no existe, por qu ir all? Un velo invisible separa a este hombre de esta mujer, a pesar de las mltiples

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similitudes que existen entre sus respectivas personalidades.


Su relacin fsica est generalmente signada por una satisfaccin casi total: ese tipo de satisfaccin que slo
dos signos de Aire pueden comprender (o desear). Por la noche, tumbado a veces solo junto a ella (s,
tumbado solo junto a ella), l se regocija cuando Gminis vuelve de su mundo quimrico, de nuevo a sus
brazos, a menudo sin siquiera sospechar que algunos fragmentos de ella han quedado all fuera, persiguiendo
rayos de luna y jugando al escondite con las estrellas. Ella le transmite la sensacin de su presencia. Y por
supuesto, parte de ella est presente: aquella parte que ha jurado amarlo y venerarlo, y no abandonarlo nunca.
No se puede pretender que ella responda por la otra parte, la descarriada, su Gemela, la que se niega a
obedecer incluso cuando ella, personalmente, se lo suplica.
Su unin sexual no ser tan devoradora como la de dos signos de Fuego o de Tierra, pero puede ser tan
refrescante como una tormenta de verano, con centelleos de truenos y relmpagos. Se trata de dos almas
etreas, mentales, que viven sobre todo en el intelecto, no en las emociones, as que puede faltar la pasin
explosiva, pero en cambio pueden disfrutar de la paz y el sosiego totales de una fusin profundamente
afectuosa. El sexo, como en todas las configuraciones de signos solares 5-9, es importante para esta pareja,
pero no es primordial para su dicha. Los dos necesitan igualmente el amor romntico, y quiz lo desean an
ms, pues forma la base autntica de la atraccin romntica entre ellos.
Los dos asumirn por turno el papel agresivo en el acto amoroso. Ambos pueden transmutarse de lo activo a
lo pasivo, de lo masculino a lo femenino, en unas condiciones extraas, msticas, que convierten sus
experiencias sexuales en un deleite constantemente cambiante pero armoniosamente amalgamado. Si tienen
camas individuales, es posible que a veces discutan quin dormir ms cerca de la ventana, pero si se
exceptan estos ajustes secundarios, los dos despertarn generalmente el uno en brazos del otro, compartiendo
una nueva maana que diluye las disputas de la noche anterior tal como el Sol dispersa las nubes.
Tal vez se necesiten y se complementen fsicamente el uno al otro, pero es posible que l est ms
enamorado de la mente y el espritu de ella que de su cuerpo, y es posible que ella tenga ms inters en el
intelecto y el alma de l que en su sexualidad, aunque slo tengan una vaga conciencia de ello. La alquimia
entre estos dos signos de Aire es vaporosa, mental y variable, en lugar de ser terrenal, apasionada y sensual.
No todas las Gminis desean hijos, y muy pocas suean con tener familias numerosas, pero cuando s los
desean, elegirn a menudo a un hombre Libra para que los engendre. Muchas chicas Gminis que no tendran
hijos con ningn otro hombre, encontrarn ms atractiva la maternidad con un hombre Libra.
Si ella se casa con l, ser porque le gusta la forma en que canta o baila o silba... la forma en que se
mueve y camina y habla y guia el ojo. Tambin la forma en que se viste. Entonces, mujer al fin, es posible
que despus intente hacerlo cambiar. Como al hombre Libra lo rige Venus, es posible que tolere esto e
intente complacerla, porque la ama, hasta que finalmente se d cuenta de que, si bien ella prospera con el
cambio, un cambio excesivo perjudica su propio equilibrio. Entonces l rugir (mansamente) y se empecinar (afablemente) para demostrar que es un signo cardinal masculino, retomar sus viejas costumbres... y
probablemente esto ser lo mejor para ambos.
Es posible que viajen mucho juntos, que tengan motivos religiosos o educacionales para reunirse. y que
se conozcan en una excursin. Si alguna vez l se interesa por los OVNI, probablemente ser por obra de
ella. Ella lo estimular para que se remonte a alturas a las que no habra pretendido llegar sin la intervencin
de ella. Como ambos tienen alas en los talones y en los corazones es posible que cambien de residencia
ms a menudo que los amantes o consortes nacidos bajo otros signos solares.
Casi no hay duda de que la mujer Gminis confundir y desconcertar de cuando en cuando a su amante
o marido Libra. Al fin y al cabo, es muchas mujeres en una. Puede ser la ms locuaz cuando l trata de
pensar o se debate con un dilema, la ms bonita cuando le ha provocado un raro acceso de clera al Libra, la
ms taciturna cuando l desea exhibirla ante sus amigos, la ms enrgica a la hora de acostarse, la ms
perezosa por la maana cuando l espera sus huevos escalfados... pero qu otra mujer podra convertirse en
semejante calidoscopio de afliccin, jbilo, fastidio, dicha, turbacin, irritacin, deleite y frustracin, como
no sea este misterio de femineidad envasado en forma de unidades gemelas?
Es cierto que puede ser desordenada, que puede perder las llaves del auto, embrollar el talonario de
cheques, derrochar su tiempo y dinero, destruir la dignidad de l y ponerle a prueba la paciencia, pero
precisamente cuando l est a punto de dejarla plantada, empiezan a gotear sus brumosas lgrimas de
chiquilla, que se trasmutan casi instantneamente en una vibrante risa geminiana... y l est nuevamente
desorientado, atrapado entre la mirada de mujeres que se agolpan dentro de esta chica que no podra salir del
bosque si no contara con la fuerza de l.

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En cuanto a l, se empear tenazmente en obligarla a ser ms lgica y estable. Criticar sus defectos, se
negar a ayudarla a recoger margaritas cuando l debe trabajar, le destrozar sus frgiles nervios, y a veces se
comportar como un juez severo y condenar el espritu libre de Gminis... pero cuando los sueos de ella
estn desquiciados, cuando su casa y su pelo estn a la miseria, y cuando tenga la sensacin de ser una
chiquilla necia y ridcula, l la har sentir mujer al decirle sonriendo: No s por qu te amo tanto, pero te
amo.
Entonces Gminis comprender que ella es el nico problema que l nunca podr equilibrar en su Balanza,
con un resultado exacto. Como es hija de Eva, sonreir para sus adentros, convencida de que slo el corazn
de l, y no su intelecto, podr analizar ntegramente la solucin del enigma que ella plantea. Sin embargo, con
perversidad tambin femenina, se negar a compartir con l esta clave del secreto de amor de Gminis, y
preferir que la adivine.
Un factor importante de discrepancias dentro de esta relacin de Aire consistir en la propensin del
hombre Libra a sopesar y juzgar las cosas, a ver la vida, las personas y las situaciones en la perspectiva y el
equilibrio justos, fra y lgicamente, con una extraa actitud de despego, desprovista de toda. extravagancia.
Esta faceta de su personalidad no slo choca en forma bastante violenta con su propio optimismo y confianza
innatos, sino que tambin entra a menudo en conflicto con la tendencia de ella a verlo todo no como es sino
como debera ser. Ella ve lo que desea ver, colorea los hechos con la fantasa, y evita el desengao (para su
manera de pensar) impregnndolo todo con un bao de ilusin.
Si l no hace un esfuerzo sincero encaminado a comprender con tolerancia la actitud de ella, es posible
que Gminis se sienta obligada a decir pequeas mentiras inocentes para defender su punto de vista. A esta
mujer suelen asustarla las personas que siempre exigen la verdad exacta, precisa, sin afeites, y que no
transigen con los tal vez, quizs y supongamos que haya sido. Entonces, podra sentirse forzada a
escapar mediante una zambullida an ms profunda en la irrealidad.
A Libra no le perjudicara agregar una pizca de imaginacin geminiana a todos los asuntos que pesa con
tanta circunspeccin en su Balanza. Porque a menudo la verdad no es lo que parece ser (esto es lo que
Mercurio le ense a ella), la lgica puede ser engaosa y los hechos pueden inducir a error.
Cuando la noche est escarchada y poblada de estrellas, quin espera que un chubasco estival se oculte justo
detrs de Arturo? Las Gemelas. Ellas saben que slo se puede adquirir la verdadera sabidura adaptndose a
las pautas siempre cambiantes de la vida. Pero l no puede aceptar las pautas de hoy sin cotejarlas antes con
las pasadas y las futuras hasta encontrarlas dignas de crdito. En algn punto del trayecto, cerca del centro de
estos puntos de vista divergentes, Gminis y Libra se encontrarn, se tocarn ligeramente... harn una pausa...
y se amarn.

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Hombre GMINIS Mujer LIBRA


Realmente l no saba nada al respecto. Slo alimentaba sospechas, pero dijo al azar:
Wendy, yo me escap el da en que nac.
Wendy qued muy sorprendida, pero interesada; y le indic con el encantador estilo de
saln, o sea con un toque a su camisn, que poda sentarse ms cerca de ella.

Se trata de un hecho astrolgico 5-9, y no queda margen para discusiones. El hombre Gminis es irresistible
cuando magnetiza sin esfuerzo a una pobre chica Libra y la induce a abandonar su existencia
maravillosamente equilibrada y a consagrar su corazn a un futuro incierto, revoloteando por ideas, pueblos,
ciudades y estados de nimo, junto a l. Por supuesto, esto tambin se aplica a la inversa. Acaso no se aplica
todo a la inversa, cuando se trata de Gminis y Libra?
Es sencillamente fascinante observar cmo una irresistible mujer Libra esparce nubes de mansa e
indefensa feminidad sobre un pobre hombre Gminis, convencindolo de que es a l a quien se le ha ocurrido
la idea de sentar la cabeza y de hacer lo nico sensato y lgico que se puede llevar a cabo despus de
enamorarse: casarse, conseguir trabajo, formar una familia y quedarse en un mismo lugar con la nica persona
que puede manejarlos a ellos dos, o sea, ella. Quin gana esta partida romntica? A veces depende de cul de
los dos tiene el signo lunar ms fuerte, pero generalmente es ella, y no l.
Sea quien fuere el que tome la iniciativa, enseguida entran a regir las leyes de la fsica y la qumica, y
estos amantes no tardarn en convertir los etreos castillos de sueos en hipotecas slidas y concretas, porque
ella huele muy bien, y es muy suave y mimosa, en tanto que l es muy rpido y espabilado e inteligente, y
puede ganarle a ella las partidas de ajedrez y de damas.
La mujer Libra casi nunca mirar dos veces a un hombre situado por debajo de su nivel intelectual. Y el
hombre Gminis casi nunca sacrificar su preciosa libertad por una mujer que no es capaz de confeccionar
anagramas con sus pensamientos y de armar crucigramas de sueos junto con l. Siempre es divertido
observar cmo a un mago Gminis lo embaucan con uno de sus propios trucos al que le han incorporado unas
pocas variantes novedosas. Sin embargo, tambin hay una dosis de justicia potica en ello. l ha pasado toda
su vida seduciendo mujeres, iniciando romances que despus interrumpa, creando la impresin de que la
culpa siempre recaa sobre su pareja y nunca sobre l, recomponiendo amistades a fuerza de locuacidad y. en
general, disfrutando de su envidiable capacidad para manipular cualquier situacin con una ristra de palabras
del diccionario complementadas por su inocencia infantil.
Ahora se encuentra con una mujer que es con creces su digna competidora en el juego de la astucia, y que
le paga con su misma moneda. Despus de dejarse convencer de que la ha cautivado y conquistado, despus
de permitir que ella encierre su espritu libre dentro de los lmites restrictivos del matrimonio no importa
que otras mujeres acepten uniones informales en la nueva era de la emancipacin sexual: las mujeres Libra no
se conforman con algo menos que una sortija de bodas, despus de todo esto, l descubrir que sus modales
mansos, delicados, persuasivos y amables ocultan una inteligencia fra, brillante, una fuerte voluntad, y una
frrea decisin de conseguir exactamente lo anhelado. Esta chica no es una conejita suave, sino un mariscal
de campo de las huestes femeninas!
La mujer Libra siempre se las ingeniar para salirse con la suya so pretexto de la justicia, la feminidad y la
impotencia, pero Libra es, en ltima instancia, un signo masculino. No ceso de repetroslo. Ella se sentir
sorprendida y dolorida cuando l la desenmascare, como en verdad la desenmascarar, porque nadie, ni
siquiera Libra, puede engatusar durante mucho tiempo a la chispeante inteligencia de Gminis. Ella no pretendi ser injusta ni falaz. Libra considera que todo es lcito en el amor y en la guerra entre los sexos, y en este
contexto la hembra de la especie es ms letal que el macho.
La mente estimulante de ella, que tanto lo atrajo al comenzar el romance, la convertir despus en una rival
peligrosa durante cualquier discusin, porque es muy experta en el arte de colocarlo en inferioridad de
condiciones mediante el recurso de hacerle perder la paciencia, y junto con sta la objetividad y la serenidad.
Entonces ella lo tiene a su merced, mientras aduce llorando que es un bruto, y que su clera es la mejor
prueba de que est equivocado. Libra lo desconcertar una y otra vez, y se valdr para ello de la estratagema
tpica de l, o sea que deformar sus asertos e intenciones, y l no podr identificar el defecto de sus

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argumentos porque ella sabe proceder con mucha sutileza, como si no hiciera nada malo y slo se limitara a
defender con limpieza y justicia su propia posicin.
La mujer Libra es tan reacia a las represiones como cualquiera de los doce signos solares, aunque quiz no
tanto como Gminis, Acuario, Sagitario y Aries. No ser prudente que su amante o marido Gminis intente
imponerle algn tipo de restriccin. Bastar que recordis a los orientales (Libra rige a Oriente). Las otras
razas no pueden controlarlos eficazmente porque, si bien parece que son mansos y pacientes, y que no oponen
ninguna resistencia, siempre se las apaan, sin embargo, para encontrar la forma sutil de anular al adversario.
El hombre Gminis nunca obtendr una victoria total sobre la mujer Libra. Precisamente cuando cree que ha
conseguido desbaratar todos sus argumentos, ella se le escabulle y adopta otra tctica o estrategia emocional,
y vuelve a pillarlo desprevenido. Pero l tambin deber recordar la curiosa objetividad de Libra. Ella
realizar inmensos sacrificios para salirse con la suya, pero cuando fracase, el anlisis de las causas de la
derrota le producir casi tanta satisfaccin intelectual como le habra producido el triunfo. Gminis deber
tenerlo presente, sobre todo porque lo mismo vale para l. Los dos tienen muchas semejanzas, puesto que
influye sobre ellos la vibracin muy favorable y armoniosa de la configuracin de signos solares 5-9.
Simpatizan, y a menudo se complementan incluso en reas en las que difieren.
En lo esencial, Gminis y Libra son maravillosamente compatibles, y tienen muchas virtudes (y tambin
vicios) en comn. Tienden a respetar sus respectivas mentalidades, intimidades y libertades de pensamiento y
palabra... en condiciones normales. Sin embargo, habr circunstancias en que l la lastimar profundamente y
quedar completamente azorado por su reaccin ofendida, por la naturaleza imprevistamente violenta de sus
emociones.
Cualquier mujer Libra enamorada de un hombre Gminis entender por qu se ha dicho del hombre regido
por Mercurio que est tan ocupado pensando, que nunca se detiene a pensar.
El no desea agredirla, pero sus estallidos verbales pueden ser crudos y cortantes para la chica Libra, que
por naturaleza reviste cada opinin con el velo ms suave del tacto y la cortesa. Igualmente, l la
reconquistar con su innata seduccin mercurial y la convencer de que no quiso decir lo que dijo, lo cual es
ms que probable que sea cierto (lo que dicen los Gminis nunca sigue siendo vlido durante ms de una
hora, aproximadamente).
Es posible que quienes nacieron bajo signos de Fuego o Tierra no comprendan su relacin fsica, pero a ellos
les bastar para llenar sus corazones de sosiego y satisfaccin. Ninguno de los dos es autnticamente
apasionado, ni realmente capaz de experimentar el amor tal como lo experimentan otras personas ms
vehementemente emocionales. En su manera de hacer el amor siempre habr un elemento delicado y
desapegado: potico y cautivante, pero no sensual. Sin embargo, el fuego latente de la fusin sexual entre este
hombre y esta mujer es tan magntico y tan cohesionante para sus respectivas naturalezas areas como lo son
los contactos ms trridos entre otros consortes y amantes. El romance siempre ser ms importante que el
sexo para Gminis y Libra. Esta actitud predominar e impregnar su intimidad con una belleza singular.
stos dos no interpretan el amor como un apetito ertico que es necesario apaciguar, sino como un arte
que es necesario refinar. No lo interpretan como una manifestacin de lascivia sino como un placer recproco
que hay que sorber lentamente, en lugar de engullir voraz o ciegamente. La mujer Libra irradia un aire
innegable de voluptuosidad, pero tambin de refinamiento. La grosera, la tosquedad, la obscenidad y la
vulgaridad la ofenden.
(Por supuesto, un signo lunar o ascendente ms terrenal, o una seria desavenencia entre Venus y Marte en
la carta natal de ella, puede diluir este elemento bsico de la naturaleza de su signo solar, pero, como
siempre, respecto de todos los signos solares, nos referimos a la dama Libra tpica.)
Existen pocas posibilidades de que el hombre Gminis, que siente ntimamente lo mismo que ella, la
ofenda de este modo, aunque tal vez l necesite en su unin fsica una mayor variedad de expresin que la
que necesita su esposa regida por Venus. S, finalmente ella se convertir en su esposa... o partir. Sabed que
Libra rige el matrimonio, y es muy rara la Libra que se conforma con una relacin emocional que no sea la
conyugal, cualquiera que sea el lapso que abarque.
La chica Libra tpica, que en circunstancias normales no puede tomar una decisin respecto del amor ms
rpidamente que respecto de cualquier otra cosa, puede experimentar. sin embargo, el deseo de casarse
impulsivamente con un Gminis antes de tomarse el tiempo indispensable para equilibrar los platillos

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descompensados de la Balanza de la decisin. El rasgo infalible del buen vendedor consiste en su habilidad
para hacer que la gente se dispute el artculo que intenta vender, y Gminis es el as de los vendedores. Cuando
lo que procura vender es su propia persona, la chica Libra no es ms invulnerable que el resto del pblico
deslumbrado al encanto y el atractivo innato de Mercurio. Ella es sensata, inteligente, perspicaz y todo lo
dems, pero dichas cualidades parecen fallarle cuando este hombre afable de ojos refulgentes, tacto ligero y
ensueos alucinantes le arrebata el corazn.
Es posible que el dinero sea un poco ms importante para ella que para l. Slo un poco. La acumulacin
de dinero y la manipulacin financiera no son la motivacin primordial de Libra o Gminis, excepto en el
caso de aquellos escasos nativos de estos signos solares que ingresan casi por azar en la actividad bancaria. El
dinero slo es realmente importante para Gminis cuando no lo tiene, cuando lo necesita desesperadamente.
Para Libra, el dinero es importante en razn de los lujos, las comodidades v la belleza circundante que puede
comprar. Sin embargo, la mezquindad y la avaricia no son rasgos propios del elemento Aire, de modo que
tendrn pocas disputas en este contexto, a menos que el hombre Gminis lo dilapide con excesiva
prodigalidad, especule demasiado a menudo, o lo juegue en apuestas muy arriesgadas. Cuando l gaste ms de
lo previsto en el presupuesto, generalmente lo har en relacin con una idea o una promocin novedosa, con
unas vacaciones o con un cambio de residencia... o por lo menos con un breve cambio de escenario. Cuando
ella es despilfarradora, suele gastarlo en ropas, en clases de danza, canto o msica, o de escultura, teatro o
yoga, y en cosas semejantes. A veces, en la decoracin del hogar y en salones de belleza. Sus actitudes
respecto del dinero, como respecto de muchas otras cosas, son bsicamente anlogas, aunque pueden diferir
en la manera de emplearlo, de cuando en cuando. (Desde luego. un signo lunar o ascendente ms tacao o
econmico puede cambiar ligeramente la imagen de cualquiera de las dos cartas natales, pero no demasiado.)
Probablemente sus hogares estarn poblados de msica, flores, libros... y nios. Quienes se aman dentro
de la vibracin de la influencia 5-9 optan a menudo por forjar una familia juntos, no obstante su renuencia a
engendrar hijos con personas de otros signos solares. Viajarn mucho, mental o geogrficamente; los
parientes de ambos ocuparn un lugar destacado en su relacin; y es posible que encuentren bases de acuerdo
o de discrepancia peridica en la religin o en la educacin superior.
Si estos dos tambin han sido agraciados por un aspecto armnico Sol-Luna entre sus respectivas
natividades, su relacin navegar apaciblemente por aguas refulgentes, entrecortada quiz por unas pocas
tormentas y arrecifes, pero en general, se desarrollar como si flotara ro abajo sobre una pluma. Con un
aspecto tenso entre sus luminarias, el aire podra tornarse hmedo, bochornoso e incluso brumoso de vez en
cuando, pero siempre tendrn la oportunidad de echarse nuevamente el uno en brazos del otro en busca de
perdn, despus de un altercado, aunque ste haya sido grave... para volver a empezar.
l le enviar flores para disculparse. Ella recordar cmo las luces centelleaban en sus ojos, cual en los de un
chiquillo, cuando estaba excitado, olvidar sus defectos, se derretir una vez ms en el corazn de l... y
empezar a analizar nuevamente por qu lo ama. Pero no resolver el enigma mientras no se d cuenta de que
l es un par de Gemelos, dos-hombres-en-uno. La mujer Libra se siente obligada a equilibrar dentro de un
todo armonioso cualquier dualidad que encuentre, en razn de su esencia regida por Venus. Nunca lo lograr
cabalmente, por supuesto, pero es posible que consiga aproximarse a la magia de Gminis ms de lo que ste
permitira que se acercara ninguna otra persona. Excepto, claro est, la otra mitad de s mismo.

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GMINIS

ESCORPIN

Aire - Mutable - Positivo


Regido por Mercurio
Smbolo: los Gemelos
Fuerzas diurnas Masculino

Agua - Fijo - Negativo


Regido por Plutn
Smbolos: el Escorpin y el guila
Fuerzas nocturnas - Femenino

La relacin GMINIS-ESCORPIN
Todos los piratas son supersticiosos; y Cookson exclam: Dicen que la seal ms segura
de que una nave est maldecida consiste en que hay a bordo ms de lo que se puede
justificar.

El supersticioso nato Escorpin tiene todo el derecho del mundo a presumir la presencia de una persona
adicional cuando trata con un Gminis, nacido bajo el signo de los Gemelos. Por supuesto hay una persona
visible, pero el mellizo (o los trillizos o cuatrillizos) de este hombre o esta mujer se esconde eternamente en el
ter, listo para aflorar en las circunstancias ms desconcertantes.
La mayora de las personas no saben que cuando se asocian con un Gminis tratan con un mltiplo,
pero Escorpin sospecha inmediatamente la verdad. Escorpin lo sospecha todo inmediatamente. Es difcil, si
no imposible, engaar a Escorpin durante mucho tiempo. La naturaleza recelosa de estos individuos los
impulsa a explorar los misterios como Sherlock Holmes, pero rara vez discuten sus conclusiones con un
doctor Watson. Lo que Escorpin sabe se lo reserva para s. Como he dicho antes, Escorpin busca, sobre
todo, el poder. El saber es poder, as que por qu cederlo? Lo cual nos trae a una tendencia bastante obvia de
la mayora de los Gminis (no todos, pero s la mayora): hablar. Algunas veces llegan al extremo de
chismorrear. En el mejor de los casos, generalmente no cuentan hasta diez antes de hablar, hbito ste que
puede ofuscar a los Escorpin ms taciturnos y reservados, aunque a menudo las palabras de Gminis son
bellas burbujas de luz y alegra.
No se trata de que los Escorpin no puedan ser tambin locuaces, a ratos. Pueden serlo... los menos. Pero
la mayora de los Escorpin prefieren que los vean y no los oigan, y si pueden evitarlo, prefieren que tampoco
los vean. He comentado en otra parte que muchos hombres y mujeres y nios regidos por Plutn tienen el
hbito de usar gafas de sol para salvaguardar el incgnito. Incluso aquellos raros Escorpin que son charlatanes tienen el don de hablar de todo menos de lo realmente importante. Pocas veces discuten algo
autnticamente personal... que les concierna a ellos, se entiende. En cambio discutirn de muy buen grado
asuntos personales referidos a terceros, excepto si han prometido guardar el secreto. Entonces sus labios
quedarn tan hermticamente sellados como si de un confesionario se tratase. Es raro el Escorpin que viola
una promesa. Para ellos, el cumplimiento de las promesas es una cuestin de honor. Y por eso la destreza
verbal del Gminis, para no hablar de sus actitudes infantiles de juego y retozo inocentes, pueden fastidiar a
Escorpin a menos que ste o sta tenga su Luna o ascendente natal en un signo de Aire o Fuego. Los
hombres y mujeres regidos por Plutn no slo recelan de las personas ligeras de lengua sino que adems
desconfan de la inocencia infantil. Escorpin tiene muchas cualidades, pero la palabra inocencia no es la
que un astrlogo elegira para describir a este signo solar.
Los Escorpin tienen lo que slo se puede definir como un rasgo dominante, que oscila entre el mal humor
taciturno y el fro distanciamiento (que a veces es arrogancia) cuando las cosas no marchan a su gusto. En
otras circunstancias Escorpin puede ser afable, sensible, compasivo y fanticamente leal... pero nunca
autnticamente clido. A Gminis tambin lo acusan a menudo de falta de calidez. (Los signos de Agua y

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Aire les parecen fros y desapegados a quienes nacieron en los elementos Fuego o Tierra.) En cuanto a la
lealtad, Gminis, como todos sabemos a esta altura, no sobresale por esta virtud, si el verdadero significado de
la palabra consiste en la devocin invariable a una persona, una idea o un ideal durante toda una vida. A
Gminis le gusta variar! A estos individuos les resulta difcil permanecer interesados en un tema durante las
veinticuatro horas del da sin variar y virar en una direccin distinta, y menos an durante todo un ciclo vital
en el planeta Tierra. Sin la variacin y el cambio de escenario peridicos, el pjaro medio de Mercurio se
sofocara de puro aburrimiento.
Como sucede en todas las configuraciones de signos solares 6-8, si Gminis y Escorpin no nacen en
el mismo crculo familiar, en condicin de parientes, o si no estn implicados en una relacin comercial, es
posible que no se encuentren nunca si no los presenta otra persona. En ausencia de una armona Sol-Luna en
sus respectivos horscopos, normalmente estos dos no tienen suficientes cosas en comn como para sentir
vibraciones palpitantes de un extremo a otro de una habitacin atestada, y generalmente necesitan la
intervencin de una tercera persona para relacionarse. Sin embargo, una vez que los acerca fortuitamente un
espectador inocente que no sospecha lo que puede resultar de la combinacin de Aire y Agua, su
configuracin 6-8 determinar inexorablemente que la relacin, ya sea amistosa, comercial o emocional,
abarque muchos servicios y devocin por un lado y un magnetismo inexplicable por el otro.
Incongruentemente (en el sentido astrolgico), los servicios y la devocin casi siempre fluyen de Escorpin a
Gminis, y la atraccin magntica de Gminis a Escorpin. Se podra decir que Gminis representa un
misterio que Escorpin no consigue penetrar a fondo, y son muy pocas las cosas que Escorpin no consigue
penetrar. Es indiscutible que esto lo frustra, pero a veces la frustracin es sinnimo de fascinacin cuando se
administra en pequeas dosis, espordicamente. Administrada diariamente, en grandes dosis, puede deteriorar
bastante el aguijn de Escorpin y embotar un poco la inocencia infantil de Gminis, erizando las alas
emplumadas de los impacientes pjaros de Mercurio.
El sagaz e intelectual Gminis es un signo de interrogacin deambulante, parlante (con nfasis en esto
ltimo), constantemente curioso y ocasionalmente espurio. Escorpin es un punto final en la conclusin del
conocimiento: la puntuacin ltima en el poder de concentracin. Normalmente los Gminis tienen distintas
magnitudes de dificultad para concentrarse, y a veces su lapso de atencin es tan breve como el tiempo
durante el cual una mariposa revolotea sobre una flor o durante el cual un ave permanece posada en una
rama.
Escorpin no slo es vehementemente dominante a ratos, sino que tambin es vehementemente orgulloso
y ambicioso, aunque de una manera encubierta, silenciosa y discreta. En verdad, Escorpin es vehemente en
todo, por dentro. Vehementemente implacable, vehementemente leal, vehementemente compasivo,
vehementemente fro, vehementemente reservado, vehementemente misterioso. Estos individuos no hacen
nada a medias, aunque por fuera parezcan inofensivos y dulces. Si son vestros amigos, lo son hasta las
ltimas consecuencias, en las buenas y en las malas. Si son vuestros enemigos, lo son hasta los mismos
extremos, en uno y en otro sentido.
Si Escorpin no hace nada a medias, se puede decir que Gminis lo hace todo a medias (o en una a tres
cuartas partes). Gminis nunca se consagra ntegramente, sin reservas, a una sola persona, idea o proyecto.
Slo pequeos fragmentos, briznas y astillas, algunas migajas. Entendis por qu es posible que nunca se
fijen el uno en el otro en medio de una multitud?
Aunque estos dos signos solares son distintos por sus motivaciones, su personalidad y su carcter, las
diferencias pueden ser interesantes. Escorpin nunca aprender todo lo que hay que saber acerca de Gminis,
y este fracaso lo preocupar muchsimo. Gminis nunca podr sondear cabalmente la tremenda profundidad
de Escorpin y nada' podra importarle menos. Realmente no. Para Gminis, la diversin se termina cuando
est resuelto el enigma. Lo que excita a los sbditos de Mercurio es el dilogo cambiante y el entretenimiento
de adivinar la trama, y no el desenlace de la escena final.
Gminis, como Virgo, tiene una personalidad especulativa y analtica, que produce una marcada tendencia
a leer entre lneas, y a imaginar por tanto, a menudo, que las personas dan a entender ms de lo que dicen.
Escorpin tampoco es lerdo en este contexto, aunque la causa es otra. En el caso de Gminis, es producto de
la agilidad intelectual, de la curiosidad y las proclividades analticas de Mercurio. En el caso de Escorpin, es
producto del miedo y el recelo puros y simples.
Pedidle a Gminis que se siente en un determinado sof, y l o ella indagar las intenciones psicolgicas y
emocionales por las que habis escogido dicho sof, en tanto que Escorpin se sentir seguro de que debajo
hay una bomba montada, cuyo estallido ha sido programado por una computadora. Existe una ligera

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diferencia en sus actitudes, pero el resultado final es ms o menos el mismo. Es imposible ocultarle algo a uno
u otro signo solar, o salvaguardar la intimidad personal en su presencia. Cuando son Gminis y Escorpin los
que se recelan, se analizan y se sondean recprocamente, en lugar de hacerlo con otro de los diez signos
solares restantes, se comportan como dos rosquillas atrapadas en la cadena mgica de aros chinos de un
prestidigitador. Cada uno de ellos genera su propia aura individual de misterio, y a ambos les gusta resolver
los misterios. Pero la aureola misteriosa de Gminis es despreocupada y variable, consiste en transmutaciones
imprevisibles de colores pastel, luces y sombras, y rpidos cambios de idea... en tanto que los teres
aureolares del misterio de Escorpin teidos de color borgoa, son mucho ms complejos, con nfasis en las
sombras, y descasan en fosos mucho ms profundos e insondables, a veces con un matiz siniestro cuando
estn influidos por el lado negativo de Plutn.
La lentitud ajena es un factor constante de irritacin para los Gemelos espabilados, alertas e
impacientes, cuyos representantes ms tpicos estn peridicamente tensos y nerviosos. Los Escorpin
tambin estn peridicamente tensos y nerviosos, pero no permita el cielo que alguien los sorprenda dando
una muestra de ello! Cuanto ms aprensivo se siente el Escorpin por dentro, tanto ms seguro, confiado y
tranquilo parece estar por fuera. Como todos los sentimientos y emociones interiores cruzan por el semblante
de Gminis, iluminando sus ojos expresivos y movedizos, no os resultar difcil decidir dnde apostar para
ganar la partida de pker. Cuando la partida de pker es una relacin recproca de cualquier naturaleza, las
apuestas pueden parecerle desmedidamente altas a Escorpin, y sin embargo para Gminis eso no es ms que
un juego, cualquiera sea la magnitud del envite. Si se pierde una partida, piensa el pjaro de Mercurio,
siempre hay otra, un poco ms adelante. Escorpin no toma las derrotas tan a la ligera. En verdad, las guilas
las toman muy, muy en serio. Para Escorpin perder es una experiencia humillante, degradante, que quizs
incluso justifica el pnico interior. (Escorpin nunca exhibe el pnico exterior.) Gminis arroja los dados de la
vida con una indiferencia aplomada, desapegada y negligente. Escorpin los arroja con fra perspicacia, y slo
despus de haber calculado escrupulosamente las probabilidades. Los dados de la vida, claro est. En una
verdadera partida de dados, el mismo o la mismaGminis calcula con bastante frialdad y precisin. La
veloz mente de Mercurio elucida en un santiamn las probabilidades de la banca.
Veamos si puede enderezar estas enigmticas rosquillas. Acaban de entrar en la habitacin. Uno de ellos se ha
deslizado silenciosamente, casi inadvertido, y permanece callado, mientras lo mira a usted fijamente a los
ojos. Usted le formula una pregunta y este personaje sigue callado, sin contestar enseguida. El otro ha entrado
en la habitacin brincando, saltando o volando, quiz rasgueando una guitarra, arrojando una raqueta de tenis
al aire y dejando flotar el final de una frase. Usted le formula una pregunta y este personaje descerraja una
embrollada respuesta en su direccin y despus se encamina velozmente hacia la fuente de avellanas partidas
que descansa sobre la mesa. Cul es cul? Cree saberlo?
Bueno, el descrito en primer trmino es un Gminis. El segundo es un Escorpin. Est confundido,
desorientado? Entonces no ha prestado mucha atencin a las insinuaciones que figuran en los diversos
captulos de este libro dedicados a Gminis y Escorpin. El Gminis lo engatusaba para hacerle creer que era
fro y aplomado, utilizando una de las mltiples identidades de Mercurio, con la misma naturalidad con que
un actor veterano salta de un papel a otro. Escorpin usaba una de las mscaras de Carnaval de Plutn, y
finga una despreocupacin informal y una ligereza petulante para ocultar su apasionante trmulo. Ahora
entiende el problema?
No se prestaron ninguna atencin el uno al otro. Vamos... adelntese y presntelos, pero la responsabilidad es
suya, no ma. Si sus signos lunares son compatibles, pueden crear juntos unos ensueos cautivantes,
vaporosos. Al fin y al cabo, el vapor traslcido no es el producto de la combinacin del aire y el agua, en la
Naturaleza? Pero si sus signos solares y lunares estn en cuadratura, u opuestos, el resultado ser la niebla, y
en medio de una niebla espesa los pjaros de Mercurio no pueden volar, en tanto que los Escorpiones apenas
avanzan a lo largo de la costa.

102

Mujer GMINIS Hombre ESCORPIN


Era el enfrentamiento de dos contra uno lo que lo encolerizaba...

Debemos empezar por admitir que algunas relaciones compuestas por esta mezcla de Aire y Agua son
coronadas por el xito: hay algunos Gemelos y guilas que se las apaan para forjar un amor perdurable,
construido en comn sobre una base slida de respeto mutuo. No son muchos, pero hay, algunos.
Si los aspectos Sol-Luna son armoniosos, pueden hallar la dicha con tanta naturalidad como cualquier otro
hombre y mujer de la estirpe de Adn y Eva, aunque debern cuidarse ms que la mayora de los amantes de
esa vil serpiente. Sin embargo, en ausencia de ese estmulo astrolgico (si sus luminarias y otros planetas
tienen un aspecto adverso en sus cartas). a estos signos especficos de Aire y Agua les resultar ms fcil y
seguro circunscribirse a la amistad, evitando los vendavales de la pasin y las aguas ms profundas de los
juramentos eternos. No les est vedado el alcanzar un alto grado de compatibilidad, pero ambos debern estar
dispuestos a esforzarse constantemente.
Para empezar, eterno es una palabra que asusta a la mujer Gminis tanto como la palabra temporal asusta
al hombre Escorpin. No se trata de que ella sea incapaz de seguir amando y siendo fiel a un hombre, porque
esto es precisamente lo que les ocurre a muchas chicas Gminis, pero la fidelidad y la perennidad deben
infiltrarse en ella sutil, gradualmente, paso a paso, hasta que quede totalmente implicada en la relacin, sin
notarlo. El hecho de emplear prematuramente la palabra eterno, o de pronosticar el desenlace del romance
cuando ella preferira adivinarlo, le estropea la diversin: A la inversa, no se trata de que el hombre Escorpin
no pueda soportar los acuerdos temporales tan bien como cualquier hijo de vecino, sino de que el empleo
de la palabra despierta en l dudas y recelos instantneos, que estropean su sensacin de dominio y poder
sobre la relacin.
Inicialmente, l se sentir cautivado por el encanto innegable de la chica Gminis, por las burbujas de
champn de su voz, por su mente lcida, por su conversacin sagaz y por su ligereza de tacto en todas las
situaciones. Naturalmente. Al fin y al cabo no es ms que un hombre, a pesar de su mscara y su capa de
Batman, y es tan susceptible como cualquier otro signo astrolgico a la atraccin de la manzana de Eva.
Entonces, al cabo de un tiempo, l empezar a notar que algunas de las deliciosas historias que ella cuenta se
han modificado sutilmente en la segunda versin. (Gminis siempre agrega una pizca aqu, quita otro poco
all, para reforzar la vivacidad... y acaso no lo hacen todos?) Es posible que ella llegue tarde a dos o tres
citas sucesivas, o quiz lo interrumpir cuando est exponiendo unos planes muy serios para el futuro de
ambos y anunciar agitada que olvid las llaves del auto en el encendido con el motor en marcha. No slo
esto, sino que adems aparc en doble fila y pretende alegremente que l pague la multa.
Ser en este momento, o en alguna etapa anloga de toma de conciencia, cuando el hombre Escorpin se
quitar de los ojos parte del polvo de estrellas que le enturbia la vista, le echar una mirada larga y penetrante
a esta mujer que casi le rob el corazn, y optar cautelosamente por tomarse un poco ms de tiempo para
analizar la posibilidad de prometerle, ante un representante de Dios, que la amar, la honrar y la respetar
durante el resto de sus das. (Veris, Escorpin es, secretamente, muy religioso.) Una vez que ha dado su
palabra,
le
duele
retractarse,
as
que
es
posible
que
la
corteje
con
ms
parsimonia hasta sentirse seguro de que ella no le dar otras sorpresas, como la revelacin
de uno o dos matrimonios y separaciones o divorcios de los que haba olvidado hablarle.
Es posible que ella casi no se d cuenta de este ligero cambio de actitud. Estar demasiado distrada
preguntndose hasta cundo podr soportar esa sofocante investigacin de su vida personal, esa intromisin
en su intimidad (nada de malo ni necesariamente chocante, sino slo cosas que ella desea mantener en
secreto)... y esos celos. Acaso una chica no puede sonrerle radiantemente al vendedor de la librera ni
detenerse a discutir en la calle los problemas de peluquera de los perros pastores ingleses con un desconocido
afectuoso sin que la acusen de ser promiscua? Y qu decir de la forma en que l mira a todas las mujeres que
encuentra, y mira... y mira... y mira?
Ella es la nica culpable de su dilema. Puesto que es una Gminis, y puesto que se amamant con el
diccionario, debera ser suficientemente culta como para saber que el hombre Escorpin, con su voz profunda,
sonora, magntica, y su mirada fija y sabia, tiene la fascinacin de la serpiente. Aunque su aspecto exterior de
fuerza e impasibilidad pueda ser formidable, detrs de esta fachada se oculta un llamado silencioso de aparea-

103

miento que pocas mujeres pueden resistir.


Una de las primeras caractersticas que ella descubrir en l, ser su increble fuerza de voluntad. Es
sencillamente inverosmil. Este hombre puede hacer todo lo que se propone: literalmente todo. Si resuelve
ayunar durante treinta das, vivir de agua durante ese perodo sin emitir siquiera un gemido de hambre o de
queja. Si decide ser presidente de su curso, de su compaa o de su pas lograr su objetivo. Si quiere
seducir a una chica para convertirla en su mujer definitiva, ella habr perdido la batalla antes de iniciarla. La
har suya.
Todo esto puede ser macabro, aterrador, para la chica Gminis de ojos refulgentes, que slo le pide a la
vida cambio y emocin, alegra... y algo que estimule su intelecto. Cualquiera pensara que al sentir la
proximidad de esas vibraciones de Plutn echara a correr, como echara a correr si se encontrara en la jungla
con un gorila jadeante, con malas intenciones. Cualquiera lo creera. Yo no. Porque conozco la anomala
astrolgica merced a la cual en determinados momentos un hombre Escorpin se parece ms a un venado
inocente, de ojos aterciopelados, que a un gorila. Tan dulce, afable y sensible, tan aparentemente necesitado
de consuelo y apoyo leal que una chica debera tener el corazn de piedra para producirle el mnimo dolor.
Huyendo de l, por ejemplo. El corazn de la chica Gminis no es de piedra. Puede hallarse estabilizado a una
temperatura menor que el corazn de una chica Aries, Leo o Sagitario con emociones ms fogosas, pero es
tierno all donde debe serlo, y el atractivo de un hombre inteligente, cuyos ojos quemantes pueden atravesarle
el alma, hace impacto certero en uno de estos puntos dbiles: Los modales de l tienen un elemento de
suavidad satinada que le hace olvidar aquella mirada de acero que es capaz de proyectar cuando despliega sus
inmensos poderes de circunspeccin y fra tenacidad. Pero en el futuro l le dar mltiples oportunidades para
recordarla.
Esto basta para explicar por qu y cmo se enamoran generalmente stos dos. Hay que agregar algo ms
acerca de la forma en que consiguen seguir enamorados. Puesto que Escorpin es un signo fijo, disfruta de
mucho autocontrol. Lo necesitar ntegramente cuando ella ponga a prueba su paciencia con su carisma
camalenico, con sus accesos de melancola, de distraccin y de dualidad de propsitos. Como Gminis es un
signo mutable, ella es muy dctil, lo cual la ayuda a adaptarse a los ambientes y emociones fluctuantes, y sin
duda necesitar valerse finalmente de esta cualidad en sus tratos con el Escorpin. Ella deber desplegar todos
sus recursos para salvaguardar su libertad y su naturalidad y su serenidad cuando l reaccione tercamente o
con violencia emocional respecto de algn agravio imaginario, despus de haberse comportado como un ngel
de comprensin. (Siempre es difcil decidir si Escorpin es un ngel o un demonio. Los Escorpin parecen
hallarse cmodos en el cielo y en el infierno, con un pie en cada lugar, pero en realidad estn en un lugar
intermedio.)
Gminis deber grabarse en la memoria que este hombre desea saber dnde est ella y qu hace durante
la mayor parte del tiempo... si no durante todo el tiempo. l tambin pretender que ella permanezca en un
lugar, ms o menos (ms ms que menos). Lo enfurruarn sus lgrimas nostlgicas por antiguos
enamorados, su actitud despreocupada respecto del dinero cuando algo cautiva su imaginacin, sus
incursiones caprichosas de un hobby a otro, pasando del canto-a-la-danza-a-la-pintura-a-la-decoracin-delhogar-ala-arqueologa-a-la-medicina, y revolvindose con, ansias de viajar cada vez que las estaciones
cambian en la Naturaleza y en su espritu inquieto regido por Mercurio.
l deber conformarse con fragmentos de devocin, besos dispersos y pataletas, con una ingenuidad casi
increble (o casi increble para un Escorpin), junto con un fro desdn mezclado con partes iguales de afecto
entusiasta, con una mente errabunda e ideas cambiantes... sin pretender que exhiba algo ligeramente parecido
al aplomo y el control emocional que l posee desde la cuna.
Ciertamente ella implica un desafo para l y para su masculinidad, porque la mayora de las mujeres
Gminis desbordan astucia y malicia femeninas, huelen a agua de colonia, y generalmente son exquisitas y
volubles, ingeniosas, talentosas e inteligentes. Pero Gminis es un signo masculino, y en cuanto a Mercurio,
el regente planetario de los Gemelos cambia de sexo tan imprevisiblemente como el viento cambia de rumbo.
As que habr momentos en que ella ofender su sentido de la virilidad, y otros en que lo halagar. Su
intelecto nunca dejar de fascinarlo, pero es posible que l se desilusione cuando descubra que la inteligencia
de ella se conforma con rozar la superficie de la mayora de las cosas, con analizarlas y luego descartarlas,
sin experimentar la necesidad de sondear las profundidades, como lo hace l con todos los temas, ya se trate
del pecado o del sexo, de la religin o de la reencarnacin, de la poltica o de la poligamia.
Lo nico que ella necesita saber acerca de los mormones es el nombre de Brigham Young y algo sobre
Salt Lake City, en Utah. Lo nico que necesita saber de geologa es la diferencia entre la turquesa y el
cuarzo, y que la fiebre del oro tuvo por escenario el Estado de Colorado, cerca de Pikes Peak, y que tal vez se

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repita si los Estados Unidos vuelven a adoptar el patrn oro.


l necesita saber mucho ms. Por ejemplo, la razn secreta por la cual Brigham Young quiso acostarse y
convivir con ms de una mujer, y poseerlas y engendrar hijos con ellas. (Brigham Young era un signo solar
Gminis, as que esperemos que Escorpin no indague demasiado a fondo. Si desentraara eso, la revelacin
podra perturbar realmente su tranquilidad respecto de la relacin que mantiene con ella.) Por lo que concierne al oro, Escorpin necesita algo ms que una informacin superficial. Quiere estar al tanto de los precios
fluctuantes del oro, de los detalles de la aquilatacin, de la compleja excavacin de un yacimiento, y as
sucesivamente.
Cuando se trata del aspecto sexual del amor, hay que recordar siempre que, si bien Escorpin es un signo
marcadamente sexual, estos hombres son igualmente capaces de mantener la continencia, la castidad y el
autocontrol (como en la vida religiosa de los monjes, curas, etctera). Si se ha enamorado de una mujer
Gminis, presumiblemente no se trata de uno de los Escorpiones que han optado por la rgida disciplina de la
abstinencia. Sin embargo, no interpretar el sexo como un juego, como un pasatiempo frvolo ni como un
deporte promiscuo. Para l, el sexo es el secreto de la vida misma. La mujer que entienda y satisfaga los
deseos ms profundos del hombre Escorpin no deber preocuparse por la fidelidad de l (a menos que su
signo solar tenga un aspecto muy negativo con planetas malficos a la hora del nacimiento). Normalmente, el
hombre Escorpin que obtenga una reaccin sincera y vehemente en su compaera, no buscar en otra parte.
El guila es muy curiosa respecto del sexo durante su juventud, pero probablemente cuando se case ya
habr satisfecho la mayor parte de esta curiosidad. Su actitud acerca del ayuntamiento fsico del amor es
profundamente apasionada, desbordantemente sensual, pero est entrelazada con una cierta dosis de pureza,
que en unos pocos Escorpiones equivale al fervor religioso.
El problema consiste en que para la mujer Gminis el sexo no es el secreto de la vida misma. Su actitud es
experimental, y los secretos ms hondos de la unin sexual tienen una importancia secundaria para ella.
Incluso aquellas mujeres Gminis cuya gemela es promiscua casi nunca desean internarse en los misterios del
sexo con verdadero entusiasmo o pasin. Se trata de un pasatiempo agradable, y nada ms. Sin embargo, este
mismo desapego respecto de la pasin fsica puede determinar que el hombre Escorpin la considere
sexualmente absorbente, un ser que lo desafa continuamente a demostrar que el sexo y Dios estn vinculados,
que toda la creacin no es nada sin la fusin del hombre y la mujer. Ya sabis cmo Escorpin aborrece
perder (sera ms correcto decir que se niega a perder). En el rea de su unin sexual ntima, sencillamente
debe ganar. Con una relacin Sol-Luna armoniosa entre sus cartas natales, l seguir tratando de explicarle
una y otra vez, repetidamente, a su mujer Gminis, este misterio que es el ms portentoso de todos. En
ausencia de este aspecto entre sus luminarias o si otros planetas recprocos de sus horscopos estn en
posiciones antagnicas l puede hacer lo impensable (para un Escorpin), y convertirse en desleal,
justificando este incumplimiento de sus votos con el argumento de que no puede soportar el amor a medias
que le tributan. Y sta es la verdad. Un guila no puede.
Quiz lo reconforte saber que, salvo discordancias entre sus cartas natales y luminarias, tiene bastantes
probabilidades de alcanzar el xtasis fsico con esta dama y de ensearle con xito los misterios de la fusin
amorosa total. Porque Escorpin representa la octava casa astrolgica del sexo (entre otras cosas) para
Gminis. En consecuencia, ella lo encuentra realmente magntico y cautivante, a pesar de su fingida
indiferencia. Bastar que l contine practicando.
A la mujer Gminis media o tpica le resulta difcil comprender el sentido de la integridad de este hombre,
regido por Plutn, a menos que ella misma tenga la Luna o el ascendente en Escorpin. En este ltimo caso,
los dos podrn ser maravillosa e inesperadamente felices, con gran asombro de sus parientes y amigos, que
slo ven las diferencias superficiales que los separan. De lo contrario, es posible que las vibraciones de la
configuracin de signos solares 6-8 les haga experimentar a ambos, de cuando en cuando, algunos perodos de
honda desdicha. Tal vez ella intuya que l procura ahogarla en un ocano de recelo, o se sienta asustada y
simultneamente desconcertada por la forma inexplicable y glida en que l se repliega dentro de s mismo.
Quizs a l le parezca que ella intenta arrancarlo de su propia alma, tal como un tornado desgaja los rboles.
An as, Gminis es suficientemente sagaz como para idear la forma de salvar su relacin, si quiere... y
Escorpin es suficientemente intuitivo como para encontrar la forma de obturar cada grieta de modo que
termine por ser an ms fuerte. Si ambos as lo desean. La palabra clave es desear. Si desean

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vehementemente redescubrir y conservar la luminosidad que conocieron al principio, es porque se aman. Y el


amor cohesiona cualquier cosa: incluso los corazones rotos en mil pedazos.

Hombre GMINIS Mujer ESCORPIN


Me atrevo a decir que te doler un poco le advirti ella.
Oh, no llorar respondi Peter, que ya opinaba que nunca en su vida haba llorado.
Entonces apret los dientes y no llor; y pronto su sombra empez a comportarse
correctamente, aunque todava estaba un poco arrugada.

El hombre Gminis posee una cualidad inusitada y excepcionalmente atractiva en virtud de la cual parece
conservarse eternamente joven... lo cual no es raro, supongo, para alguien que renace todos los das, pero s lo
es en la medida suficiente para atraer a la mujer Escorpin, normalmente circunspecta y cautelosa, y para
inducirla a preguntarse qu es lo que lo hace centellear con tan diversos colores del espectro de humores.
Ahora bien, cuando una chica Escorpin empieza a preguntarse algo, es imposible conformarla hasta que
termine de satisfacer su curiosidad con un conocimiento completo. Esto implica acercarse a l ms... y ms...
y ms... hasta que de pronto ella mira con expresin alarmada en torno.
Inesperadamente, se encuentra flanqueada por dos personas, tan diferentes como el da y la noche. Cul
es el hombre al que ella se acercaba ms y ms? Los dos. Los dos son el mismo hombre. El hombre Gminis
es vctima del sndrome de los Gemelos, como sabis. Quizs ella tambin lo saba. Quiz no. Pero sea como
fuere, esto alterar y derrumbar su proyeccin aural natural, fra, aplomada, que pareca decir Yo puedo
afrontarlo todo. Puede afrontar esto? Puede lidiar con esta alma introvertida-extrovertida, este chiquillo
regocijado y abatido, este hombre framente cruel y sin embargo sensible y tierno? El Gminis es un laberinto
de falacias, contradicciones, negaciones y afirmaciones.
No importa. S, puede lidiar con l. Es una Escorpin, y puede afrontar, resolver, dominar, conquistar... la
situacin aparentemente imposible. De veras puede? No estoy segura. Pero ella lo est. Al hombre Gminis
no le importa realmente que pueda o no. El slo pensar que esta criatura de los abismos y el misterio,
encantadora, vehemente pero aplomada y femenina, est dispuesta a intentarlo implica una excitacin
suficiente para ponerlo eufrico y hacerle silbar una flamante meloda e impetrar un deseo deslumbrante a la
primera estrella que ve.
Para l, conjeturar el desenlace es mucho ms emocionante que saberlo. El hecho de saber deja al
Gminis sin ninguna razn para seguir viviendo. El hecho de no saber le deja a ella sin ninguna razn para
seguir viviendo. Ah, s! Parafraseando al pobre Hamlet: Saber o no saber, se es el problema. se es
segura y categricamente el problema que se interpone entre estos dos en todo momento, el problema que
debe ser resuelto, finalmente, antes de concebir la esperanza de que puedan disfrutar de una felicidad
recproca perdurable.
Tendris que comprender, o mejor dicho, ella tendr que comprender que el hombre Gminis es orgnica y
congnitamente incapaz de comprender el amor como una pasin eterna y voraz, tal como lo entiende ella.
Quiz haya hombres Gminis que aman a una mujer totalmente y para siempre (en verdad, una vez yo misma
conoc a uno), pero estos Gemelos son casos muy raros y aislados, e incluso a ellos los obsesiona a veces el
brumoso ensueo de otra cara, que flucta por los lmites de su relacin amorosa estable, o puede producirse
una ruptura, antes de que vuelvan a su autntica compaera-del-alma, en estos casos... o por lo menos, es
posible que se pregunte, interiormente, de qu experiencias se habrn privado por el hecho de ser
mongamos. El Gminis ms tpico disfruta el cosquilleo de elegir entre varias mujeres a las que preferir, y
se queda alelado cuando una de sus pequeas alondras inofensivas resulta ser un guila, sobre todo si se trata
de un guila de Escorpin. En la Naturaleza, el guila es un ave mongama. Tambin lo son la mayora de las
guilas de Escorpin, por naturaleza. (No todas, slo la mayora. Cuando nos ocupamos de los signos solares,
y no de todo el horscopo, debemos tomar en cuenta los promedios y los porcentajes generales.)
Venus es el planeta del amor, y a los Gminis los rige el planeta Mercurio, cuya influencia sobre Venus en

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la natividad determina que las emociones sean dispersas y frvolas. Plutn es el regente de Escorpin y el
efecto que este planeta produce sobre Venus consiste en hacer que su influencia sea muy seria, poderosa, pero
secreta y oculta. Notaris las obvias diferencias que existen en este trato de Venus, Diosa del Amor. Venus
tambin las nota, y se desconcierta cuando las dos fuerzas vibratorias de Mercurio y Plutn mezclan sus
rayos. Es posible que el hombre Gminis y la mujer Escorpin no las noten enseguida, porque estn
totalmente consagrados a dejarse fascinar por sus respectivas rarezas. A l le parecern" francamente raros los
celos de Plutn, muy implantados en ella. A veces los celos de Escorpin son una pasin an ms devoradora
que el amor que los origin.
A Gminis le resulta difcil entender todas las formas de celos. Por supuesto, l es debidamente
susceptible, como todo hombre medio, a los pequeos ramalazos normales de miedo ante el peligro de que
otro hombre le quite su mujer, pero le resultan incomprensibles las tempestades arrolladoras que desencadena
una chica Escorpin que se siente amenazada. Cuando esta mujer ha sido agraviada, o sospecha que tal vez la
han agraviado, su aguijn de Escorpin puede asestar una picadura mortal al ego del hombre Gminis que es
inocente de las acusaciones proferidas contra l, o que es tan culpable como se pensaba, tanto da. La venganza
es en verdad dulce para la mayora de las mujeres regidas por Plutn. Por tanto, si la engaan, o si sospecha
que la engaan, la represalia ser rpida y cruel, incluso vengativa, si su Sol tena un aspecto adverso con
planetas importantes a la hora de su nacimiento.
Enterado de esto, el hombre Gminis, cuya naturaleza no puede dejar de ser ligeramente voluble e
inconstante, deber comprender a qu se expone si comete el error de intentar entablar un romance frvolo con
esta chica, para la que no existe nada parecido al romance frvolo, sino slo la pasin devoradora y eterna.
Exceptuando a la mujer Aries, no puede haber otra tan celosa como la Escorpin. Pero Aries no experimenta
la misma necesidad de vengarse del amante o el marido que experimenta Escorpin. Tauro y Cncer
celosos? No, la palabra que se aplica a estos signos solares es posesivo. Lloran mucho y sufren
profundamente. Pero es raro que monten escenas violentas. Posesivo y celoso no son sinnimos. Cualquier
hombre que haya amado a una Escorpin conocer muy bien la diferencia.
sta es una configuracin de signos solares 6-8, pues Escorpin es la sexta casa respecto de Gminis, y
Gminis es la octava casa respecto de Escorpin, de modo que en la relacin habr una magnitud notable de
servicios y de devocin desinteresada al deber, ms un fuerte magnetismo sexual (que slo se experimenta
cuando las dos personas implicadas son amantes o consortes; cuando la relacin implica a parientes, amigos o
socios, pondrn nfasis, entre ellos, a otras cuestiones de la octava casa, ajenas al sexo.) Generalmente los
servicios se los ofrecer Escorpin a Gminis. La vibracin sexual es la atraccin que Gminis siente por
Escorpin. Sin embargo, curiosamente, lo que el Gminis tpico menos puede ofrecer es sexualidad. El sexo
no reviste una importancia superlativa para este hombre, a menos que venga acompaado por la poesa, por la
experimentacin, por ideales exaltados o por intrincadas partidas de ajedrez y damas mentales. Es posible que
l exude toneladas de apostura, simpata, masculinidad, inteligencia y romance, pero normalmente no exuda
demasiada sexualidad (para alguien que no sea Escorpin). En consecuencia, parece extrao que ella lo
encuentre tan irresistible, desde el punto de vista fsico; y a menudo l la encuentra irresistible a ella (aunque
esto no es tan difcil de entender).
Quizs es su aire de chiquillo esquivo, la mirada de trucos de sus imgenes reflejas que pasan de un
estado de nimo a otro ante los ojos de ella, lo que despierta en Escorpin esa obstinacin por penetrar hasta
la mdula de su corazn y su alma mediante la unin sexual. l parece guardar un secreto, muy
despreocupadamente pero de todos modos, es un secreto, y un secreto o un misterio que nos desafa a
elucidarlo atrae a Escorpin como la llama atrae a la polilla. Ella debe o conocerlo - conocerlo real,
autnticamente para stisfacer su intelecto y colmar su corazn. Por consiguiente, la expresin fsica de su
amor recproco la magnetizar, a veces durante muchos aos, hasta que ella comprenda finalmente que nunca
nadie conocer todas las facetas de este hombre. Ni siquiera una Escorpin. Aproximadamente al mismo
tiempo, l se dar cuenta de que nunca podr jugar con ella, hasta las ltimas consecuencias, su juego
favorito del adivina quin y el adivina qu soy. Ella no descubrir hasta el ltimo fragmento de los
sueos privados de Gminis, pero devanar suficientes fibras de la tela del alma de l como para crearle la
sensacin alarmante de que lo estn conociendo, en forma lenta pero segura, mejor de lo que l querra que
lo conozcan. Y as su fusin fsica, aunque haya sido al principio un elemento estimulante de su amor, puede
ir enfrindose progresivamente, hasta convertirse por fin en la ruina de su romance, a menos que cada uno de
ellos est dispuesto a enfrentar sinceramente lo que los ofusca a ambos... y a comunicarse autnticamente.
Sin embargo, ella no debe tratar de analizar exageradamente su relacin.

107

Tal vez l sea proclive a criticarla y analizarla a ella, porque est colmada de una intriga silenciosa, que
ciertamente no es superficial. Sin embargo, es posible que al proceder as l se interne en aguas ms
profundas de lo que imagina. Escorpin no se somete de buen grado al anlisis, y los tenaces interrogatorios
del curioso Gminis pueden inducirla a encerrarse en una clera hosca, o a arremeter con una violenta
reaccin emocional. La intimidad personal es tan sagrada para ella como para l, y quizs an ms. Los dos
debern reconocer este rasgo el uno en el otro, y cada uno de ellos deber desistir de explorar lo que le
intriga en su pareja si no quieren que el resentimiento se levante entre ambos como un muro alto y macizo.
Para derribar el muro, l ensayar su simpata, sus antiguos chistes, sus formas ms imaginativas de hacer
el amor, sus mltiples tcnicas romnticas. Ella ensayar sus modales ms sensuales, su objetividad ms fra
y su dulzura ms sosegante. Ambos probarn todos los trucos que llevan ocultos en la manga, y entre los dos
sumarn bastantes trucos (entre los tres, si contamos al Gemelo de l). Sin embargo, el muro crecer y se
ensanchar cada vez ms. Debe de haber una forma de sortearlo. (La hay.)
A veces, lo nico que no ensayan, cuando tratan de escalar el muro que los separa, es dejar un poco ms de
espacio despejado entre sus corazones para que el amor pueda respirar libremente. l est dispuesto, pero es
posible que ella le tema a un espacio nuevo y desacostumbrado entre su persona y la de su compaero tanto
como le temera a un abismo oscuro y desconocido abierto delante. El espacio est compuesto esencialmente
de aire, y como l es del elemento Aire, se siente ms cmodo cuando tiene mucho espacio alrededor. Pero
ella es del elemento Agua y necesita estar rodeada por una corriente fluida de contigidad, pues de lo
contrario no podr respirar.
Siempre es triste que el hombre Gminis y la mujer Escorpin que antao se amaron descubran que han
perdido el rumbo de la dicha, porque l cree en cosas invisibles, totalmente mgicas y maravillosas, a pesar de
su equipo mental ciberntico. Ella tambin. Ella cree en mundos invisibles an ms extraos y prodigiosos
que aquellos en los que cree l. Pero las fuerzas hermticas, inexplicables, de Plutn, la hacen callar, le sellan
los labios y el corazn, y le prohben hablar de esos mundos con la franqueza con que lo hace l. Ella nunca
podr expresar sus ensueos ms ntimos con tanta facilidad como el locuaz Gminis. Y esto es lo triste.
Si por lo menos el hombre Gminis fuera ms paciente con las vehementes pasiones y los abismos
emocionales de ella. Si por lo menos la mujer Escorpin pudiera encontrar la forma de susurrarle al espritu
andariego de l que ella tambin anhela resolver todos los misterios que se alojan all lejos entre las estrellas
y los cometas; que ella tambin ansa respirar libremente, correr carreras con el viento y buscar 10 milagros
de la infancia, parcialmente olvidados... y sin embargo, tambin parcialmente recordados. El aire fro de la
noche es infinitamente ms refrescante que la rancia oscuridad de las hmedas cavernas de la ansiedad, por
donde Plutn les ordena a los Escorpin que se desplacen cuando estn preocupados.
Ocurre con demasiada frecuencia que este hombre y esta mujer se tienden los brazos, sin terminar de
tocarse. Se llaman el uno al otro, pero l slo oye la meloda de la brisa primaveral, y ella slo oye el ruido de
las olas que rompen contra la costa. Si se detuvieran durante el tiempo suficiente para or sus respectivos
gritos secretos, tal vez se remontaran juntos hasta la altura apropiada para verlo todo, incluso su relacin,
desde una perspectiva distinta.
Sus planetas regentes podran ayudarlos, si escucharan. Al fin y al cabo, Mercurio y Plutn, junto con
Urano, son los que le ensearon a Merln todo lo que ste saba, y tambin guiaron secretamente al ariano
Houdini. Ciertamente pueden ensearles a Gminis y Escorpin cmo prepara su filtro de la felicidad una
bruja blanca. Cuando vuestros guardianes son un par de magos como stos, deberis saber distinguir la ilusin
de la realidad... o descubrir que las dos son intercambiables. Como os plazca.

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GMINIS

SAGITARIO

Aire - Mutable - Positivo


Regido por Mercurio
Smbolo: los Gemelos
Fuerzas diurnas Masculino

Regido por Jpiter


Fuego Mutable Positivo
Smbolos: el Arquero y el Centauro
Fuerzas diurnas Masculino

La relacin GMINIS-SAGITARIO
...; y no era uno, sino que eran cuatro!
Los Sagitario no son siempre bulliciosos y activos, ni viven tomando puntera con el arco y la flecha
para derribar la hipocresa y la falacia. Algunos de ellos son muy tmidos e introspectivos, casi como los
bhos, con una decidida actitud pacifstica... mejor dicho, son pacifistas que a veces emplean los puos para
subrayar sus argumentos en pro de la paz. (Existe la palabra pacifstico? Ahora existe.) Sin embargo,
incluso stos hablarn con descarnada sinceridad cuando les pidan su opinin. Tmidos o agresivos, todos los
Sagitario miden el mundo con el rasero de la verdad. Lo que pretendo dejar claro es que Sagitario es un signo
doble: mitad caballo, mitad hombre. Hay dos tipos distintos de Arqueros: los que se parecen a la mitad anterior
o humana del Centauro, y los que se parecen a la mitad posterior o equina. Es posible que hayis conocido a
ambos tipos. Yo los he conocido.
A esta altura, todos saben que Gminis tambin es un signo doble, simbolizado por los Gemelos: dual en
el contexto de la personalidad, mltiple en el contexto de la palabra y la accin, infinito en el contexto de la
Naturaleza. Imaginis lo difcil que es ordenar todas estas identidades para describir una relacin compleja entre
slo dos personas? Las matemticas del problema ya son desalentadoras.
Pensad en vuestro amigo o vecino (o amiga o vecina) Sagitario. Acaso no tiene el don de
disparar la impoltica flecha verbal de la verdad y, sin embargo, es uno de esos (o una de esas) Sagitario que
se comportan como el enanito apocado de la historia de Blancanieves cuando concurre a una fiesta? Todos los
hijos e hijas de Jpiter son espabilados e ingeniosos, pero los pocos tmidos pueden disimularlo y pasar casi
inadvertidos delante de desconocidos. Por favor, observad que he dicho los pocos tmidos.
Ahora, pasad a Winston Churchill, el de la regocijada y chispeante mirada jupiteriana; a John Lindsay, el
ex alcalde de la ciudad de Nueva York (un autntico Sagitario de libro de texto); al travieso Mark Twain; al
taciturno (relativamente taciturno) Arthur Brisbane, que estuvo en el New York Journal; y finalmente, saltad
al ltimo cachorrillo afectuoso que visteis menear la cola (todos los perros afectuosos son Sagitario, por derecho propio), y decidme qu es lo que tienen todos en comn. (Si os place, agregad a William F. Buckley.)
Est bien, la astrloga soy yo, y se supone que debo decroslo. Tienen en comn la sinceridad, la jovialidad, el
candor estimulante, la sabidura y el ingenio... y la torpeza, mezclada con el garbo. Creo que podemos partir
de aqu, recordando constantemente que si bien todos los Arqueros tienen estas cualidades, algunos de ellos
son extrovertidos de lujo y otros son introvertidos de lujo. Cuidad de recordarlo, por favor, porque no
interrumpir el texto de este captulo para repetroslo. No quiero que alguien lea esto e intercale a cada rato:
Pero si Marvin es tan callado, o Mildred es tan tmida. Ya ha quedado en claro que algunos Sagitario son
callados, tmidos y apocados. Pero muchos ms son locuaces y expansivos.
Tengo la impresin de que estamos de vuelta donde empezamos en el primer prrafo, pero quiz hemos
avanzado un poco. Siempre se plantea este problema astrolgico en el contexto de los signos dobles.
Afortunadamente, stos son slo tres: Gminis, Sagitario y Piscis. Bueno, quiz podramos agregar a Libra.

109

Toda Balanza tiene dos platillos.


En cuanto a los Gminis, no tienen ningn rasgo en comn, excepto el hecho de que cada uno de ellos es una
doble imagen reflejada en el espejo, y tiene dos o ms caracteres y personalidades que puede cambiar con la
misma naturalidad y rapidez con que usted o yo podemos cambiar el baador por un jersey durante un da en
que el viento no termina de decidirse.
Gminis es Aire, Sagitario es Fuego, y en la ltima seccin de este libro veris cmo se combinan estos
dos elementos. Estupendamente, la mayora de las veces. Desastrosamente, en otras. Pero en trminos
generales, se llevan bastante bien. Gminis puede azuzar a Sagitario e inducirlo a hacer cosas tanto
negativas como positivas que el Arquero nunca habra hecho si no lo hubieran animado los Gemelos. El
Aire siempre aviva el Fuego y aumenta la magnitud de las llamas. A veces Gminis puede sentirse sofocado
por culpa de Sagitario, porque el fuego quema el oxgeno, pero tambin puede calentarlo.
sta es una configuracin de signos solares 7-7, as que, por supuesto, se ponen recprocamente un poco
nerviosos, porque cada uno de ellos tiene cualidades que al otro le faltan pero que secretamente le gustara
cultivar. Gminis necesita la sublime motivacin, los ideales, la calidez, el entusiasmo y la sinceridad del
Arquero, y tambin la capacidad de Sagitario para recorrer ms terreno, mental, emocional y geogrficamente... para dispararse hacia una estrella, y alcanzarla.
Sagitario anhela el sereno aplomo y la simpata de Gminis, el talento de no meter la pata, de mantenerse
tranquilo e impvido frente a las situaciones ms turbadoras. Y necesita, sobre todo, la destreza verbal de
Gminis, denominada tacto.
Cuando se juntan, tienen dos opciones. Cada cual puede admirar los rasgos opuestos del otro, y puede
tratar de imitarlos, para as desarrollarse y madurar espiritualmente. O puede temer y envidiar las cualidades
opuestas del otro, y puede tratar de menoscabarlas, en razn de lo cual se privarn recprocamente del
orgullo de ser como son.
Tanto Gminis como Sagitario tienden a ser chispeantes, en lugar de slidos; precipitados y temerarios,
en lugar de fiables y estables. Ambos son capaces de desarrollar un alto grado de inteligencia, pero no
necesariamente apropiada para alcanzar objetivos de diseo y construccin perdurables (a menos que otras
configuraciones planetarias de su carta natal les confieran esta cualidad, cosa que. desde luego, sucede en
algunos casos).
Las ideas de ambos son ms parecidas a estrellas fugaces o cometas que a soles estables. A menudo
Gminis y Sagitario pueden completar en pocos das una obra brillante. pero es posible que un proyecto que
exija ms tiempo y esfuerzo no d tan buenos resultados, a menos que en sus natividades estn presentes las
configuraciones 'planetarias coadyuvantes, de fuerza y paciencia, que acabamos de mencionar. El refulgente
regido por Mercurio y el benvolo regido por Jpiter se llevan fabulosamente bien durante la mayor parte del
tiempo, desde el punto de vista de la confraternizacin, la empata instantnea y la compatibilidad general.
Pero siempre existe la posibilidad de que el astuto Mercurio (Gminis) no pueda resistir la tentacin de
engatusar de alguna manera al sincero Jpiter (Sagitario), y el resentimiento de ste puede ser violento
(puesto que el Arquero corresponde al elemento Fuego).
Los Sagitario, aunque a veces son exageradamente emocionales, casi siempre estn desprovistos de
malicia. El espabilado y voluble Gminis que juega al ajedrez mental con el confiado Arquero, puede
lamentar ms tarde el dao que le ocasion a otro ser humano, aunque haya sido involuntario. Segn las
leyendas antiguas, los dioses sienten un afecto especial por estas criaturas sanitarias del Zodiaco, y las
protegen escrupulosamente de quienes podran lastimarlas. Esta es la base de la llamada suerte de Jpiter.
Se dice que a los prudentes les basta con una advertencia, pero no todos los Gminis son siempre prudentes,
sino slo astutos, a veces demasiado astutos, y el pjaro de Mercurio puede meterse, cuando menos lo espera,
en su propia trampa.
El ingenio gil, el intelecto rpido y la elocuencia de Gminis pueden seducir a algunos pjaros de
Mercurio y convertirlos en grandes embaucadores, vendedores taimados de autos de segunda mano, y
polticos, y en estafadores, traficantes de drogas o simples granujas de la vieja escuela. Sin embargo, estas
mismas cualidades permiten que muchos Gemelos se transformen en excelentes maestros, genios literarios,
artistas y msicos creativos, matemticos inteligentes, cientficos brillantes y vendedores sinceros y
convincentes de todo tipo de artculos. La dualidad de Gminis empuja a estos hombres y mujeres en ambas
direcciones. Sus dos personalidades gemelas tironean de ellos entre el da y la noche, la oscuridad y la luz, el

110

bien y el mal, y esta lucha espiritual contina, atenuada, incluso en los Gminis prosaicos y vulgares.
La mayora de los Gminis son tan inteligentes y le tienen tanta aficin a su libertad que no se arriesgarn
a que los pillen y los encierren por haber infringido la ley, pero aquellos que coquetean con actividades
antisociales optan por los delitos de dedos ligeros, como la manipulacin de las combinaciones de cajas de
caudales, la falsificacin y la adulteracin. Rara vez un Gminis ser culpable de homicidio, aunque los
Gemelos pueden ser cmplice de asesinato. El delincuente Gminis prefiere planear el crimen y delegar la
accin en otros: sta es la tendencia de todas las personas de signo mutable.
Siempre hay unas pocas excepciones notables, dispersas y muy raras, que confirman esta regla, o
cualquier otra, pero slo una fraccin insignificante de las almas confundidas que perpetran asesinatos son
Gminis. Para matar se necesita una dosis de agresin fsica descarnada mayor que la que pueden movilizar la
mayora de las personas regidas por Mercurio. La violencia ofende la sensibilidad del Gminis medio o tpico.
Todos los Gminis, cualquiera que sea su edad o sexo, tienen un intelecto activo y fecundo, que siempre acta
a gran velocidad, y no hagis caso de la circunspeccin y placidez que observis en la personalidad superficial
de un Gemelo, el que parece predominar en la personalidad de Mercurio. A pesar de su circunspeccin y
placidez, su cerebro est siempre activo, activo, activo. No juzguis a Gminis slo por su manera de hablar.
Observad atentamente los resultados. Quin sabe cmo, las cosas se hacen, y se hacen deprisa, cuando
Gminis quiere, aunque la actividad exterior sea lenta. La apariencia de lentitud es muy engaosa. Lo que
importa es el resultado final.
En verdad, muchos Gminis eligen deliberadamente este disfraz para engaar a la gente. Dejan que el
Gemelo circunspecto sea la fachada de la personalidad de Mercurio, y retienen constantemente en un
segundo plano al Gemelo diligente, superespabilado, inquieto, para que dirija la estrategia, sin que los legos
en astrologa se den cuenta de ello. Vigilad los ojos de los engaosamente circunspectos. Descubriris una
titilacin constante, una mirada rpida y fluctuante que abarca toda la situacin con un solo vistazo. Los
ojos dicen la verdad.
La naturaleza esencial y bsica de los individuos regidos por Mercurio es muy parecida a la de los regidos
por Jpiter: radiante, alegre y optimista (aunque Gminis nunca es tan ingenuo como Sagitario, ni siquiera en
su juventud). Ms adelante, ambos adquieren distintos grados de cinismo, aunque de alguna manera siguen
conservando una cierta esperanza infantil.
S, s que esto es contradictorio, pero el carcter de todos los signos dobles lo es. D-o-b-l-e. D-u-a-l. Dos
cosas al mismo tiempo. Paradojas simultneas.
En cuanto a los pobres Arqueros, no son siempre tan persuasivos como Gminis, y se encuentran a menudo en
aprietos cuando atizan verdades incmodas. No se trata de que los Sagitario no sean simpticos. Cuentan con
inmensas reservas de simpata, fresca como la lluvia e impregnada de roco, pero pierde rpidamente su poder
cuando empiezan a descerrajar una risita de palabras hirientes con muy poca sutileza o tacto. La palabra que
identifica a los Sagitario es contundente, y con contundencia no se ganan partidos amistosos. Por lo menos
no tantos como los que est en condiciones de ganar el Gminis, orador elegante y sagaz, que a menudo
triunfa merced a su sola elocuencia. Gminis tambin puede ser hiriente al hablar, pero slo cuando elige el
arma del sarcasmo.
Generalmente Sagitario es incapaz de recurrir al sarcasmo. el lenguaje cortante del Arquero slo hiere
porque tiene la connotacin de la realidad que la mayora de las personas no desean or. El sarcasmo implica
una cierta deformacin de la verdad para hacerla ms clara, y normalmente Sagitario no est en condiciones
de manejar o comprender este procedimiento (a menos, por supuesto, que la Luna o el ascendente del Arquero
est en Gminis).
Hay que sealar que aquellos raros y silenciosos Sagitarios y Gminis que se hallan sintonizados en
una frecuencia ms baja (exteriormente) que la de la mayora de los Arqueros y Gemelos, rara vez
permanecen callados cuando estn juntos. Gminis se las apaa, mediante la pura vibracin urica, para
avivar en el Sagitario ms manso el fuego abrasador de un monlogo desacostumbrado, unas veces alegre y
entusiasta, y otras colrico. Asimismo, el Arquero puede estimular en el Gminis ms dcil (superficialmente
dcil) el deseo de ser ms locuaz. Pero una vez que estos dos se han incitado recprocamente a hablar, es
posible que no se escuchen realmente el uno al otro. Quiz parezca que escuchan, pero en verdad uno no hace
ms que esperar que el otro termine de hablar, para poder enunciar una opinin antagnica. Un desacuerdo
dramtico entre estos dos puede producir mucho alboroto y la necesidad de que intervenga una tercera
persona, como rbitro. O tambin es posible que uno de los dos subyugue por completo al otro, en cuyo caso
el subyugado buscar liberarse de la coercin apenas se le presente la primera oportunidad. En otras palabras,
se ir. A veces definitivamente.

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Sagitario tiende a asestar ms golpes emocionales a Gminis (aunque los Gemelos procurarn ocultar sus
lesiones tras una mscara de fro aburrimiento e indiferencia), y es ms probable que Gminis consiga
deformar la mente de Sagitario imponindole configuraciones extraas, y provocando un estado de depresin
psicolgica al sbdito de Jpiter.
Cuando estos dos (o cuatro) armonizan, empero, merced a un intercambio Sol-Luna positivo entre sus cartas
natales, su compaa puede ser entretenida. Uno siempre trata de aventajar al otro, y tambin se ayudan
mutuamente a sortear los obstculos, y encuentran la manera de expresarse y de comunicarse con lo que
parece ser un lenguaje privado.
A menudo, Sagitario y Gminis intercambian mensajes entre sus mentes y corazones mediante la msica, la
poesa o el arte, o incluso mediante el lenguaje corporal (que es una forma de comunicacin muy vlida, y que
puede ser la ms elocuente). Se buscan el uno al otro montados sobre olas de entusiasmo y excitacin
invisible... suean juntos sueos imposibles... buscan trboles de cuatro hojas... y los encuentran con
sorprendente frecuencia (gracias a la suerte de Jpiter y a la agudeza visual de Mercurio)... y reflejan, en sus
ojos, la comprensin espiritual de la necesidad y del deseo de emularse tal como la captan todas las
polaridades influidas por la configuracin de signos solares 7-7, intuyendo de alguna manera que son dos
anttesis, y buscando fusionarse en un todo mediante la comunin recproca.

Mujer GMINIS Hombre SAGITARIO


Emprendieron una danza bacanal, que lo hizo levantar inmediatamente; desaparecieron todas
las evidencias de debilidad humana, como si le hubieran arrojado un cubo de agua.
Cuando los Gemelos (dos personalidades) de la chica-mujer Gminis emprenden una danza de deliciosa
distorsin y tortuosidad, justo delante de los ojos sinceros del confiado Sagitario, este hombre puede sentirse,
al principio, extraamente impotente, en lo mental y lo emocional, si no en lo fsico. Entonces,
repentinamente, se siente estimulado a enfrentar el obvio desafo de la dualidad con que lo provoca esta
mujer.
En muchos sentidos, el Arquero Sagitario es un hombre excepcional. Tiene una visin y una ternura
extraordinarias, y es considerado y elocuente. Orlo hablar de sus ideales, transportado por el entusiasmo, es
una experiencia muy especial para la chica Gminis, que sencillamente debe sentirse fascinada en el plano
intelectual para poder enamorarse. l le describir algunos de sus logros (los Arqueros nunca son demasiado
modestos) y muchos de sus sueos, y siempre ser franco con ella. A veces despiadadamente franco. Si l no
satisface cabalmente todos los requisitos que ella le impone a un amante o marido, bueno... es justo sealar
que nunca ningn hombre los satisface, ni los satisfar.
Como sucede con todas las personalidades complejas, el hombre Sagitario slo aprender a conocer
lentamente a la chica Gminis. Ella se reserva varios fragmentos de su naturaleza mltiple, y slo le permite
espiar uno por vez. En el primer encuentro, ella se replegar netamente. Slo proyectar a uno de los
Gemelos: el que puede cautivarlo, claro est. Incluso es posible que adopte un raro para ella
comportamiento monoltico, y que lo escuche afablemente, pero sin hablar ni interrumpirlo casi nunca. Qu
criatura perfectamente deliciosa y femenina es sta! Y es verdad. Una chica-mujer Gminis (es ms correcto
llamarla chica y no mujer, a cualquier edad) es perfectamente deliciosa. Pero en cuanto a femenina, siempre
debemos recordar que en astrologa Gminis es esencialmente un signo masculino, aunque Mercurio, su
regente, puede cambiar de sexo en un abrir y cerrar de ojos, para engaa' a los espectadores. Igualmente,
masculino es masculino, cualquiera sea hoy la acepcin del trmino. En el caso de esta chica-mujer, significa
que generalmente est muy resuelta a obtener lo que desea, y que tambin es excepcionalmente capaz de
lograrlo. El problema consiste en que, como pesa sobre ella la maldicin de los deseos gemelos y la
motivacin dual, nunca sabe con exactitud qu es lo que desea. Lo que anhelaba el lunes puede parecerle
desvado y soso el jueves. o quizs incluso el martes (de la misma semana). A menudo, se siente desgarrada

112

no entre dos series de acciones posibles, sino entre dos series de reacciones posibles. Debe decir que s o que
no? Y adems, el decir lo uno o lo otro, la har feliz o infeliz? l deber compadecerla un poco. La vida
nunca es fcil para esta mujer, y el amor plantea un problema de magnitud an mayor. Luego, cuando intenta
explicar sus emociones multifacticas al hombre Sagitario en el que finalmente ha resuelto confiar, corre el
riesgo de que l la acuse de ser una embustera y una impostora. Es justo?
El hombre Sagitario franco, veraz y sincero, es a veces intolerante con la mujer que, a su juicio, no tiene
todas estas virtudes, cualesquiera sean las inteligentes excusas mercuriales que ella esgrima. Sin embargo, es
posible que ella contraataque con el argumento, muy correcto, de que l tambin tiene dos facetas, porque es
audaz, temerario e inquieto, y al mismo tiempo o mejor dicho, en tiempos distintos es sensible,
impresionable y retrado. Sus dos facetas se manifiestan en diversos estados de nimo, sus gustos y sus fobias
son muy pronunciados, y es extremadamente susceptible a la tensin o a la discordancia de su entorno, sobre
todo en el mbito de su relacin amorosa. Esto significa que puede estar un poco nervioso, y que los
circunloquios etreos de Gminis pueden desencadenar fcilmente en l una abrasadora explosin con el sello
de Sagitario. As que no es raro que ella prefiera callar algunas cosas, aunque l la acuse de ser una
embustera, con tal de no arriesgarse a pasar por la prueba de su desaprobacin. Cuando los Arqueros expresan
su desaprobacin, sta puede ser brutalmente contundente y precisa, y desmedidamente dolorosa. La
repeticin de esta experiencia puede impulsarla a afilar la famosa arma verbal de Gminis, el sarcasmo, todo
lo cual provocar una pequea conmocin en el nido de amor. El pjaro de Mercurio sumir al Centauro en
un estado de confusin mental, y l, como represalia, abrir algunas heridas en las frgiles emociones de ella.
Sin embargo si sus aspectos Sol-Luna son armoniosos (en conjuncin, en sextil o en trgonos), estas
pequeas diferencias de opinin y tcnicas de discusin casi siempre terminarn en poticas (las de ella) y
dramticas (las de l) declaraciones de renovada devocin. Todo esto es muy romntico. Pero si el Sol de uno
y la Luna del otro estn en cuadratura o en oposicin, es posible que vivan picotendose y erizando las
plumas, lo cual podra generar enfrentamientos ms graves a medida que transcurran los aos. Dado que se
trata de Gminis y Sagitario, conviene enmendar esta ltima frase y sustituirla por otra que diga: A medida
que transcurran los meses, incluso las semanas. Estos dos signos siempre se las ingenian para acelerar el
desarrollo de la vida, y del amor.
Los vuelos raudos de las fantasas fericas de ella pueden ser demasiado intangibles y msticos para
l. Las visiones de Jpiter no pecan por ser poco o nada prcticas. La mayora de los Sagitario son capaces de
prever y pronosticar el desenlace de un plan desde su concepcin inicial. La mayora de los Gminis no, y
ser prudente que esta chica imite las cualidades de l que a ella le faltan, entre las que se cuentan la
perseverancia y la tenacidad. Por ser Aire, ella es emocionalmente ms fra que este hombre, cuya naturaleza
es ms fogosa y apasionada. Por tanto, es posible que l sea el ms afectuoso de los dos en la expresin fsica
del amor, y que tenga ms necesidad de tocar las cosas. Ella sera ms feliz si sus mentes se tocaran ms a
menudo.
Desde el punto de vista sexual, los dos podran alcanzar una rara armona de experiencia mutua a travs
del acto amoroso, porque el sentido ltimo del sexo es la materializacin de un vehemente deseo de que cada
persona se fusione con la otra se convierta realmente en la otra-, en la medida- en que.ello es una
posibilidad terrenal, para lograr la unidad espiritual, mental y corporal. Nadie puede lograrlo mejor que este
hombre y esta mujer con una polaridad de signos solares opuestos, porque la actividad sexual entre ellos
as como entre todos los amantes influidos por la vibracin 7-7 siempre descansa sobre su mutua
necesidad bsica de convenirse cada uno en el otro, y por consiguiente de convertirse en una persona ms
completa.
En algunas relaciones Gminis-Sagitario se concierta una especie de tregua en virtud de la cual los amigos y
vecinos observan u oyen pocos altercados. (No me referir a los familiares o parientes, porque ninguno de
los dos es particularmente adicto a los lazos de sangre.) Cuando se observan estos lapsos de paz y sosiego,
generalmente se pueden atribuir al talento de Gminis para rehuir todo lo desagradable. Ella no tiene un gran
poder para resistir los obstculos o para apartar a las personas chocantes, pero su magnfica red de seales
nerviosas sensibles le advierte a menudo con antelacin la proximidad de las tempestades, y as puede
guarecerse bajo un rbol y evitar que la moje la lluvia o la fulmine un rayo.
Ella elude los problemas con su agilidad propia de Mercurio, o sencillamente finge no entender por qu l
est tan ofuscado... y despus de un rato, el Arquero tpico desistir de imponerle una discusin que en verdad
puede llevar a cualquier parte. Siempre termina dando vueltas en crculos, cosa que no le desagrada a ella le
encantan los crculospero que puede dejarlo a l mental y emocionalmente exhausto. De modo que l
podra replegarse cada vez ms dentro de su peridico, o salir a la calle, o irse a la cama temprano (y solo)

113

mientras su comunicacin se deteriora.


Esta no es la situacin ideal, por supuesto, pero los convierte en vecinos ms deseables que el tipo de
pareja Gminis-Sagitario que litiga toda la noche, expresando cada desacuerdo ntidamente y a voz en grito.
Pocas veces estos dos se amarn sin una cierta dosis de tensin, aunque sus aspectos Sol-Luna sean
excelentes. Sus naturalezas bsicas no pertenecen a la categora de las que sufren en medio de un silencio
total, masoquista. Puesto que constituyen una configuracin de signos solares 7-7, siempre intervienen todas
aquellas cualidades opuestas que es necesario equilibrar, y el equilibrio es un arte que se aprende slo despus
de una larga prctica. Preguntdselo al volatinero del circo. Por supuesto, tantos equilibrios pueden
desgastarlos de cuando en cuando, pero es mejor desgastarse que herrumbrarse, como les sucede a tantos
amantes que no tienen absolutamente nada en comn, ni siquiera el deseo recproco de adoptar los vicios y
virtudes diferentes de la otra parte. Gminis y Sagitario tienen algunas cosas en comn. A ambos les gusta
leer y a ambos les gusta hablar. Pero ella colorea lo que lee con su vvida imaginacin, y l salpica su
conversacin con ms verdades, quiz, que las que ella desea or o se atreve a enfrentar.
Ella piensa que el mundo debera ser un lugar mejor, y sus hebras entretejidas de imgenes coloridas
deforman la verdad de la existencia en la medida justa e indispensable para que a ella le parezca que lo es.
Est mal? Para l lo est. l tambin quiere que el mundo sea un lugar mejor, pero est convencido de que si
uno se propone cambiar los hechos, antes debe enfrentarlos cara a cara. En esto, difieren drsticamente.
Este hombre y esta mujer pueden entablar una relacin muy dichosa si el suyo tambin es un matrimonio
consagrado a una actividad comn. Por ejemplo, si se trata de un equipo conyugal dedicado a las relaciones
pblicas, la publicidad, las artes, la ciencia o la medicina. La excitacin del ensueo los ayudar a superar las
pequeas borrascas. Cuando sus ojos estn fijos en las estrellas, y no constantemente en el respectivo
consorte, pueden formar una pareja fabulosa, en todos los sentidos. En la mitologa griega se dice: Mercurio
alegra a Jpiter. Asimismo, Gminis puede alegrar inmensamente a Sagitario. Qu puede darle l a ella?
Puede suministrarle el don de frenarla, de protegerla con sus alas de ms envergadura, porque al Arquero le
gusta volar, tambin, con su imaginacin, hasta la altura adonde llegan sus flechas. Pero tal vez estos amantes
deberan mantenerse un poco separados, mientras remontan las cometas de sus aspiraciones. Si estn
demasiado juntos, en un da ventoso, es posible que los cordeles se enreden irreparablemente.
El hombre Sagitario naci lleno de ideales. La mujer Gminis naci llena de ideas. Existe una diferencia entre
estas palabras, la letra 1, que en ingls es la 1 de love, amor. Una idea nutrida por el amor, alcanzar la octava
ms alta de s misma, y se convertir en un ideal. Si se aman suficientemente, el Arquero podr coger las
ideas de su dama Gminis, trasmutarlas en los ideales de Jpiter, y alumbrar la mente ya radiante de ella con
la luz de la diferencia.

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Hombre GMINIS Mujer SAGITARIO


Tambin era aficionado a la variedad, y el deporte que lo tena absorto en determinado momento
dejaba de atraerlo sbitamente, as que siempre exista la posibilidad de que la prxima vez
que cayeras te dejase ir.

Cuando una chica Sagitario se enamora, todo su espritu busca en torno como un cachorrillo
confiado, vido de afecto, listo para retribuirlo cabalmente. Slo ms adelante los errores acumulados durante
los aos la inducen a usar la mscara teatral del escepticismo y el cinismo, que ella cubre con el colorido
maquillaje grasiento de los payasos. Su sinceridad innata y su franqueza estimulante conmoveran al ms duro
de los corazones masculinos. Pero a veces slo despiertan en determinado tipo de hombre Gminis la tentacin de poner a prueba su propia sagacidad, distorsionando la integridad, los ideales e incluso el amor de ella
con complejas piruetas mentales. Al proceder as, l coquetea con el descalabro. No el de l. El de ella. De
alguna manera, Gminis siempre se las apaa para salvarse en el ltimo acto. Es la chica Sagitario
sinceramente afligida la que conserva las cicatrices de estas tcticas abusivas del intelecto de Mercurio, a
veces durante muchas lunas... a veces definitivamente.
Sin embargo, antes del final, es posible que ella evoque el poder desmesurado de Jpiter, y que practique
algunos desgarrones en la tela de la preciosa tnica de libertad de los Gemelos, con algunas fogosas escenas
emocionales de pasin feroz, que (si l pertenece a la categora de Gminis que estamos describiendo, o sea
los que se dejan controlar por su Gemelo negativo) probablemente se merecer con creces.
Esta chica es tierna, veraz, y tiene una necesidad desesperada de afecto y estabilidad emocional. Si el
intercambio Sol-Luna de sus horscopos es negativo, es posible que los haya ido a buscar en el lugar menos
adecuado, porque Gminis puede ser cruelmente indiferente, fro e incomprensivo cuando lo domina su
Gemelo negativo. Qu se hizo del hombre jovial, alegre, tierno y carioso que ella crey encontrar, el que le
escriba poemas tan conmovedores, el que corra carreras de ida y vuelta con ella hasta la Luna, el que le
enjugaba las lgrimas con sus besos mientras sonrea de soslayo como un chiquillo? Pues sigue all, jugando
malvolamente al escondite, perdido entre las mltiples identidades reflejas de este individuo complicado. l
puede dejarla llorando, con un despreocupado y aburrido encogimiento de hombros, sin siquiera volverse
para echarle una mirada de compasin, y al da siguiente puede regresar con un ramillete de violetas, con un
flamante poema y con su antigua ternura, implorando perdn y jurndole otra vez devocin.
Esto no es precisamente lo que ella necesita. La chica Sagitario es muy vulnerable. Este tipo de amor con
altibajos, que pasa de la cruel frialdad al hasto desapegado (y frecuentemente al engao puro y simple),
mezclado con un romance maravilloso, en compaa de un hombre capaz de encantar y domesticar a las
serpientes sibilantes, puede estremecerle el alma y hacerla desconfiar de s misma como mujer e incluso
como ser humano. Es posible que a esta altura l comience su falso psicoanlisis. No es l quien necesita la
terapia. Es ella. Quizs incluso logre convencerla de esta probable 'falacia. Gminis puede convencer a
cualquiera de cualquier cosa la primera docena de veces, hasta que las vctimas crdulas toman conciencia de
la estratagema. El hombre regido por Mercurio puede perpetrar los actos ms abominables, y pretender
despus que la mujer que lo ama le pida disculpas a l, como si las fechoras las hubiera cometido ella. Ahora
entendis por qu estos hombres son excelentes vendedores. Pueden vender cualquier cosa a cualquiera, y lo
que es ms, casi nunca los pillan cuando trampean, eludiendo la letra de la ley del amor... o de cualquier otra
ley.
Por supuesto, esto slo se aplica a los Gminis cuyos Soles natales estn en muy mala posicin con
planetas poderosos a la hora del nacimiento. Estos Gemelos merecen que alguien los denuncie
astrolgicamente delante de las chicas Sagitario cuyo romance con semejantes individuos podra tener un
desenlace trgico. Afortunadamente, la gran mayora de los hombres Gminis tienen ms inteligencia e
ingenio que taras de carcter.
De todas maneras, no hay que olvidar que los Gminis de tipo negativo han destrozado ms
corazones y desintegrado ms vidas de las que se podran recomponer con ocanos de pegamento. No
merecern ms clemencia hasta que se hagan ms introspectivos y demuestren un poco de compasin por el
desastre que provocaron con su falta de calor humano, con su cruel y extraa necesidad de ganar todas las
partidas de pker mental que jugaban. Desgraciadamente, incluso este tipo de Gminis es casi irresistible
cuando pregunta, con ojos aparentemente inocentes (aunque huidizos, si los observis atentamente): Quin,
yo? S, t. A menudo se puede descubrir a esta categora de hombres Gminis por el nmero de alias o

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seudnimos que utiliza. Muchos nobles hijos de Mercurio se ocultan, bromeando, detrs de varios nombres,
pero este tipo lo hace por razones ms siniestras. No es cierto, Jim? Quiero decir David... o acaso es Mel, o
Fred? Como se llame. Por sus palabras y actos los conoceris. Si por lo menos ellos se conocieran
verdaderamente a s mismos...
El hombre Gminis ms iluminado, simptico y casi mgico, ejerce, sin embargo, una fuerte atraccin sobre
la mujer Sagitario tpica... y ella sobre l. Los opuestos no siempre se atraen, pero cuando pertenecen a sexos
opuestos (oponiendo al hombre y la mujer), a menudo s se atraen. Gminis y Sagitario estn en oposicin
astrolgica, y el fuerte magnetismo empieza con esta sensacin, que experimenta cada uno, de que el otro
tiene cualidades inmensamente deseables. Es cierto. Cada uno de ellos posee lo que le falta al otro. Por
consiguiente, pueden darse muchas maravillosas lecciones recprocas que riman con la dicha. Su magnetismo
fsico mutuo es difcil de resistir. Lo mismo vale para sus vibraciones mentales y emocionales. Y as es como
gravitan el uno hacia el otro hechizados por la admiracin... si se encuentran bajo los aspectos planetarios
correctos, cuando las estrellas sonren en una noche de brisa y la Luna es suficientemente nueva como para
impetrarle deseos.
Comparten una eterna juventud espiritual, una mentalidad indagadora, la sensibilidad a la Naturaleza y la
necesidad recproca de libertad, de espacio despejado entre ellos dos para poder desplazarse hacia sus
objetivos. A los dos les gusta soar solos durante un rato, y volver despus el uno a los brazos del otro en
busca de estmulo. Pero solo no es lo mismo que solitario. Tanto el hombre Gminis como la mujer Sagitario
buscan la vida gregaria y desean rodearse de gente, porque temen, secretamente, a la soledad.
Casi seguramente ella tendr un animal domstico. Un gatito o un perro. Y le pondr un nombre raro. La
chica Arquera ms encantadora que conoc llam Rana a uno de sus gatitos, y al otro sencillamente (y
lgicamente) Gato. A l tambin le gustan los animales, pero es posible que no les tenga una devocin tan
vehemente como la de ella. Gminis querr al animal siempre que ste no interfiera en sus propios placeres ni
imponga desembolsos de dinero que l preferira gastar en s mismo, en tanto que la mujer Sagitario
sacrificar a menudo su propia comodidad en aras del animal que estima. Hay otras diferencias sutiles entre
sus personalidades. Gminis anhela remontarse a nuevos horizontes, y ella tambin. Pero ella necesita
asimismo una mano clida y firme que la sujete mientras se remonta. A l tambin le gusta cogerse de la
mano, pero si ella lo suelta, l har un ademn de despedida, ms o menos alegremente, en tanto que es
posible que ella se extrave si l la suelta.
Generalmente es en la vida sexual donde encuentran solaz para olvidar los conflictos planteados en otras
reas, como les sucede a todas las configuraciones de signos solares 7-7. La fuerte atraccin qumica que los
une aumenta con frecuencia a medida que transcurre el tiempo, y aunque disminuya, siempre perdura, latente,
esperando que la aticen, que la reactiven para reparar las grietas de su relacin.
Tambin los une una cierta pasin mental, que genera un terreno frtil para la consumacin fsica. A menudo,
su unin sexual empezar mucho antes de la hora de acostarse, quiz mientras se desayunan, mediante
mensajes transmitidos con los ojos de un extremo al otro de la habitacin, mediante una nota romntica que l
deja donde sabe que ella la encontrar, mediante la intimidad compartida de una sonrisa familiar o de un
apodo especial, privado, que, traducido, significa: Te amo, te necesito, te deseo.
La amenaza que se cierne sobre su relacin sexual reside en la posibilidad de que l utilice
peridicamente con ella sus estratagemas propias de Gminis. El hombre Gminis no desdea la idea de
provocar una reyerta con el fin deliberado de estimular la emocin o el deseo de su pareja. La clera tiene la
extraa cualidad de excitar la pasin entre stos dos. Entonces el altercado se resuelve mediante la unin
fsica... o debera resolverse. Pero es as? l es capaz de reflotarlo, para discutirlo a fondo, despus de la
unin, cuando debera estar sepultado y olvidado. Para ser justos con l, debemos confesar que ella tiende a
hacer lo mismo. Los dos deberan aprender a enterrar sus desavenencias despus de hacerse el amor. Por qu
emplear el sexo como arma recproca? Pero ste es el uso que le dan a menudo Gminis y Sagitario. Los celos
son la causa de muchas de sus disputas, y con razn. Ninguno de los dos signos se destaca por su fidelidad
impecable. Ambos son tan curiosos, verstiles, caprichosos y vidos de variacin que no pueden salvaguardar
una lealtad pura como un copo de nieve.
Si sus aspectos Sol-Luna son favorables, o si uno tiene un ascendente Capricornio, Tauro o Escorpin,
pueden mantenerse totalmente fieles mientras viven juntos. De lo contrario, es posible que se produzca algn
descarro o infidelidad, aunque slo asuma la forma de un ligero galanteo informal, pblico, que jams llega a
consumarse fsicamente. l es ms propenso que ella a mariposear. Pero las chicas Sagitario aprenden
enseguida los diversos juegos que les ensean los pjaros de Mercurio. Y entonces volarn las plumas.

116

l puede ser tan... verstil. Primero, el rpido sonrojo de la felicidad, el aleteo de la excitacin. Despus el
ceo fruncido, sbitamente, sin aviso previo. La mirada desviada. La tristeza, que se ahonda hasta
transformarse en depresin. Momentos despus, nuevamente la sonrisa fluctuante de Mercurio, y una alegre
invitacin a hacer botar guijarros en el lago o a escuchar cmo las ranas interpretan conciertos romnticos a
orillas de un bosque encantado que l conoce. Primeramente l le pide que prepare tostadas con canela.
Despus no tiene apetito. El tema musical de su romance es ms o menos as. con variaciones, y a pesar de
todo ella sigue esforzndose valerosamente por acompaar la cancin.
Por supuesto, la mujer Sagitario puede experimentar a su vez algunos cambios de humor. Como el suyo
tambin es un signo dual, puede ser alternadamente sensible, introspectiva, temperamental y custica. Si uno
de los dos consigue mantenerse eufrico mientras el otro est deprimido, y viceversa, podrn ayudarse a
superar los trances alarmantes. Ser bueno que ambos estn eufricos, pero esto implica que luego ambos
estarn deprimidos. A este hombre y a esta mujer los beneficiaran inmensamente sendos grficos de
biorritmos. No puedo obsequiarles nada mejor que este consejo.
l deber controlar su tendencia a ser sarcstico cuando est irritado; y ella deber reprimir su propensin a
hacer comentarios hirientes cuando lo que l necesita es su ternura y su comprensin. Las verdades
contundentes de Sagitario casi siempre duelen. Los sarcasmos de Gminis tambin. Con todo su candor
inocente, la chica Sagitario no entiende lo que significa esta palabra. Significa... bueno, el sarcasmo casi
siempre implica decir exactamente lo contrario de lo que uno realmente piensa y cree, y exagerar la falacia
para subrayar la verdad. Por ejemplo: Claro que no me molesta que la cuenta de telfonos ascienda a
trescientos dlares, cario. Me siento importante cuando le pago tanto dinero a la telefnica, aunque por eso
debamos cancelar nuestras vacaciones de este verano. Veis? As es el sarcasmo. Ella se sentir herida y
desconcertada. Por qu l no dice claramente que est encolerizado porque la cuenta de telfonos es muy
elevada, y que est decepcionado porque en razn de ello tal vez debern privarse de las vacaciones de
verano? (Entonces ella podra decir que lo siente, y trabajar horas extraordinarias, o buscarse un empleo
adicional por unas pocas semanas, para completar la diferencia. Tal como estn las cosas, no dir que lo
siente, y basta!)
Por qu l no dice aquello? Porque es un soador potico, un Gminis, querida amiga, incapaz de
decir exactamente lo que piensa. Para vivir ms o menos satisfecha con este hombre inteligente y
maravillosamente fascinante, Sagitario no tendr que prestar atencin a lo que articulan sus labios sino que
deber leer la verdad slo en sus ojos. Sin embargo, sus ojos fluctan constantemente de un lado a otro, y es
difcil leer en ellos... su expresin cambia sin cesar.
Lo nico ms hiriente que los custicos sarcasmos del hombre Gminis es la contundente sinceridad de la
chica Arquera. Cuando estos dos estn mal apareados, pueden rebanarse recprocamente el corazn. Pero su
relacin tiene una faceta ms positiva. Siempre hay otra faceta cuando dos signos dobles se juntan, para bien
o para mal... y puede ser para bien. Por lo menos se respetarn mutuamente su intelecto, y encontrarn sus
respectivos humores ms fascinantes que la aburrida semejanza de los dems.
Al hombre Gminis le gusta escudriar las galaxias, meditando sobre los infinitos mundos que hay
en el espacio. Entonces, inesperadamente, desva su atencin hacia s mismo, y se pregunta: Supones que
tambin hay infinitos mundos dentro de mi espacio interior, mundos que podra explorar?. Su Gemelo
siempre presente exclama: S! Los hay!... y empieza otra aventura. si la mujer Sagitario desea retener a
este hombre, su faena de amor deber consistir en acompaarlo en la bsqueda del Pas de Nunca Jams,
procurando no odiar a la tercera persona que siempre deber seguirlos: la sombra de l. Tambin podr tratar
de coserlo fuerte y pulcramente a su sombra (la de l), como Wendy lo hizo con el mercurial Peter Pan. As l
no perder tan a menudo la otra mitad de s mismo. sta es una especie de charada, pero Jpiter le susurrar la
respuesta, en el corazn, si ella escucha.

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GMINIS

CAPRICORNIO

Aire - Mutable - Positivo


Regido por Mercurio
Smbolo: los Gemelos
Fuerzas diurnas Masculino

Tierra - Cardinal - Negativo


Regido por Saturno
Smbolo: la Cabra
Fuerzas nocturnas - Femenino

La relacin GMINIS-CAPRICORNIO
El rugido reverber por las montaas y los ecos parecieron gritar ferozmente:
Dnde estn, dnde estn, dnde estn?
Qu se proponen estos Gminis? Qu posicin ocupan? Dnde estn?, grita el Capricornio
sinceramente desconcertado, mientras procura tratar con los Gemelos. No estn en ninguna parte
responde el astrlogo. No estn en ninguna parte y sin embargo estn en todas. Es difcil de explicar, si
no se toma en cuenta que cada Gminis es por lo menos dos personas.
Creis por casualidad que una Cabra va a aceptar una respuesta tan obtusa? Imposible. Es demasiado
efmera, demasiado abstracta para suministrar una solucin prctica al problema. As que no ensayis la
astrologa con los capricornianos cuyas vidas son desplazadas de la rbita de la rutina fija por las
extravagancias de un par de Gemelos ocultos dentro de un Gminis. Ser intil. No s con exactitud qu es lo
que s dar resultado, pero esto ser intil.
Podis tratar de explicarle a Capricornio que Gminis es un signo de Aire, y que en consecuencia las personas
regidas por Mercurio se parecen mucho al viento. El viento es invisible, pero fuerte. Puede ser amigo o
enemigo. Es ms o menos neutral (como Suiza). A veces arrancar de cuajo edificios enteros. A veces, no. El
viento es imprevisible, y Gminis, tambin. El viento es libre e impredecible, y es imposible adivinar en qu
direccin soplar. sta es una pregunta que slo formulan los necios, y por tanto cualquier astrlogo que
intente contestarla ser un necio. Igualmente, todo esto no impresionar a la Cabra, que, despus de todos
vuestros afanes, seguir preguntando en qu direccin sopla este viento (o bufido) especfico. Decidle que
hacia el Norte. Sopla hacia el Norte. Y despus olvidadlo. Aunque el viento emocional de Gminis estuviera
soplando hacia el sur, el este o el oeste en el momento de la discusin, podis estar seguros de que al cabo de
un par de horas soplar hacia el norte. Veis? Estos problemas siempre se pueden solucionar, con buena
voluntad.
El taciturno Capricornio no admitir la facundia de Gminis si sta prolifera demasiado. Aunque a la
mayora de las Cabras les gusta escuchar indirectamente chismorreos sobre los famosos (los que han
triunfado, aunque slo sea en sus propias comunidades), pocas veces se inclinan a participar personalmente en
ellos. (En los chismorreos, quiero decir. Siempre estn dispuestos a participar en la fama.) Para Saturno, el
regente de Capricornio, la prudencia es el comienzo de la sabidura, para hablar como para actuar.
Simblicamente, Saturno es el planeta de la sabidura ganada mediante largas pruebas de iniciacin en
muchas encarnaciones, y es tradicionalmente el regente de la cultura hebrea. Tambin es el regente de los
exasperantes empleadores y los abuelos mandones, y de todos los usufructuarios de la autoridad, incluido el
Gobierno: de todas esas personas e instituciones que disfrutan cuando dicen NO. Categricamente NO
(por vuestro propio bien, claro est). S es una palabra extranjera para la Cabra tpica.
A los capricornianos incluso les resulta difcil pronunciarla, y algunos la sustituyen por otras como okey

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y eso supongo. Incluso conozco a una Cabra de Colorado que reemplaza el s por la palabra Iupiii
(pronunciada con mucha suavidad)... hbito este inexplicable pero no por ello menos tpico. De modo que a
Capricornio no le gusta decir S. Creo que esto tiene algo que ver con la seguridad pecuniaria o financiera.
Para Capricornio, no es una slaba de la palabra economa, y s es una slaba de la palabra asilo.
Algo por el estilo.

sta es una configuracin de signos solares 6-8, lo cual significa que Capricornio atraer a Gminis por una
razn relacionada con el misterio, la muerte, el sexo, la reencarnacin, la hipnosis, la psiquiatra... o con
alguna distorsin de la mente, incluidas las drogas. Uno de estos elementos estar implicado sutil o
inconscientemente. A la inversa, la Cabra siempre encontrar una aplicacin til a los Gemelos, y a menudo
Gminis terminar sirviendo de alguna manera al ligeramente egosta Capricornio. En la relacin aflorar una
forma u otra de altruismo, ya sea en el mbito del grupo familiar, de los negocios, de la amistad o del amor.
Pero al fin y al cabo alguien debe sacrificarse cuando dos personas tienen caracteres esencialmente tan
distintos.
Los capricornianos se visten a la antigua, con refinada elegancia, y esta aureola ilustre no es ms que el medio
apropiado para irradiar la sabidura y pericia de Saturno adquiridas mediante la experiencia. Las actitudes de
algunas Cabras tambin huelen a naftalina. La mayora de los capricornianos desprecian los muebles
modernos, y prefieren lo tradicional, lo viejo, lo perdurable. Dejad que los Gminis se cian al pensamiento
moderno y decoren sus hogares con plsticos y cromados refulgentes. Capricornio piensa que lo verificado y
autntico es lo ms sensato. Nadie puede discutir la superioridad de la artesana. Yo no la discutira, desde
luego. Pero Gminis tal vez s. Los regidos por Mercurio pueden argumentar en defensa de cualquier punto
dbil y hacerlo pasar por razonable o viable. Excepto en una discusin con la Cabra. Los capricornianos rara
vez son vctimas de la persuasin geminiana. Oh, puede suceder, pero cuando sucede, muy de cuando en
cuando, las Cabras descubren enseguida la manipulacin mental, intuyen que los dados psicolgicos que
emplean contra ellos estn cargados, y se repliegan, resueltos a no dejarse pillar dos veces con la defensa baja.
En los capricornianos hay algo ms que una pizca de la magnificencia y serenidad de la Naturaleza, y
tienen un reflejo del porte majestuoso de la cabra monts. Todo esto atrae lgicamente al inquieto Gminis,
que busca el reposo espiritual con ms desesperacin de la que jams habr de demostrar o confesar. El
hombre, la mujer o el nio capricorniano, circunspecto pero bondadoso y afable, puede suministrar una base
de seguridad emocional, estable, serena y racional, que a los Gemelos les resulta al mismo tiempo
reconfortante y necesaria: un lugar donde plegar las alas entre un vuelo y otro. La vida se desplaza tan
velozmente para los Gminis, que a menudo se convierte en un borrn alarmante, y a veces necesitan
apaciguar su frenes interior. Capricornio parece ser casi un morador del sosiego, de los bosques verdes y
silenciosos, y puede aportar muchos momentos de tranquilidad a los Gemelos que se detienen a descansar un
poco. Junto a Capricornio, Gminis puede estudiar las formas de la vida y el amor, cindose a la marcha
Ms parsimoniosa de Saturno.
Capricornio tambin puede aprender de Gminis. ste, inocentemente egocntrico, independiente y curioso
en el plano intelectual, tiene la aptitud mgica de internarse temporalmente en todos los libros que ha ledo,
en todas las pelculas que ha visto, en todas las sinfonas que ha escuchado, y de moverse en ese mundo
llamado imaginario con tanta naturalidad y soltura como si estuviera en su reino natal.
Por consiguiente, los Gemelos pueden darles a las Cabras una valiosa leccin acerca de la forma de ser
algo ms que un visitante en los mundos de la literatura, la msica y el arte... pues es en estos mundos
quimricos donde ellos viven. Gminis slo vuelve a esta Tierra por una obligacin krmica, para reingresar
en una prisin de carne despus de una larga temporada de ensoacin en otros niveles de conciencia.
Capricornio se beneficia de ello, porque a la Cabra le resulta muy difcil comprender la realidad de cualquier
otro lugar que no sea la Tierra. Capricornio est muy arraigado en ella, es muy prctico y terrenal, tanto en
el nivel consciente como en el inconsciente.
Por supuesto, hay unos pocos capricornianos cuyas imaginaciones centellean durante una tormenta de
verano, cuyos espritus se maravillan y deambulan en una noche serena y poblada de estrellas, que exhiben
un travieso sentido del humor, que entienden de psicometra, de OVNIS, de telepata... y de los misteriosos
portentos de la Gran Pirmide. Pero la Cabra ms tpica no pierde el tiempo cavilando sobre cosas que no se
pueden desmontar y volver a armar mediante el uso de un plano. Cuando los capricornianos vuelan, hacen

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sus reservas con tiempo, para mayor seguridad. Cuando viajan en auto, llevan consigo un mapa de carreteras,
para no equivocarse. Pero no hay planos ni mapas para guiar al viajero astral. Para viajar fuera del cuerpo,
por mundos situados ms all de los sentidos materiales o fsicos, no se necesitan reservas... slo fe.
Hay que admitir que cuando Gminis investiga otros mundos, no acta necesariamente motivado por la fe
o la sed espiritual. Lo que motiva generalmente a los Gemelos es la simple curiosidad, esa misma que mat
al gato del cuento pero que no parece ser fatal para los pjaros de Mercurio.
Una cantidad sorprendente de capricornianos satisfacen el apetito de su alma mediante el sistema, aprobado
por Saturno, de consagrarse al arte. A veces lo coleccionan, lo disfrutan, se convierten en mecenas, o pintan,
bosquejan o dibujan personalmente. Algunos se convierten en actores profesionales o dramaturgos. Unos
pocos se dedican a alguna variante de la msica. Pero independientemente de lo que es o hace, la Cabra
mantiene ambos pies slidamente plantados en la tierra firme, y hasta dnde puedes mecerte en una estrella
con ambos pies apoyados en el suelo? Hay que estirarse un poco para entrar en otras galaxias. De todas
maneras, cualquier actividad creativa, de cualquier tipo que sea, es afn a la conciencia embrionaria de que
existe algo ms all de los cinco sentidos, con el atisbo de un sexto, incluso de un sptimo... y otro ms. ,Los
antiguos afirmaban que Saturno es un planeta de siete dimensiones. Nosotros vivimos nuestra existencia en la
tercera dimensin, mientras que el tiempo mismo, l ahora eterno, como saba Einstein, es la cuarta
dimensin. Seguramente la sptima debe contener una sabidura ms sublime incluso que la que puede
contemplar Gminis. Pero Saturno guarda bien su secreto, con la habitual discrecin y el habitual silencio
propios de Capricornio.
Los capricornianos tienden a ser circunspectos. Los Gminis son conversadores natos y naturales. Cul de
los dos tiene razn? Los dos... cada uno a su manera, siempre que ninguno impida que el otro haga lo suyo.
Cuando se trata de estos dos signos solares, hacer lo suyo es una cosa rara. Pero el diccionario da varias
definiciones de raro. Por un lado, es sinnimo de extrao, y por otro, se emplea en expresiones como de
rara perfeccin, de rara hermosura, con el significado de extraordinario.

Mujer GMINIS Hombre CAPRICORNIO


...la isla los estaba aguardando. Slo es as como se pueden divisar esas costas mgicas.
Ah est dijo Peter serenamente.
Dnde, dnde?
Donde apuntan todas las flechas.
Ya sea que ambos permanezcan poco o mucho tiempo juntos, el hombre Capricornio nunca conseguir
entender por qu la chica Gminis no atina a ver claramente lo que para l es muy obvio: las consecuencias de
la palabra y la accin, que son, inevitablemente, la recompensa o el castigo. La ley de Newton en virtud de la
cual Toda accin produce una reaccin, le parece patente. Por qu ella no la ve tambin?
Desde la perspectiva de ella, el error de l consiste en interpretar el mundo material como una realidad... y
la imaginacin como un pasatiempo independiente, entretenido. La mente de ella est atareada, sondeando,
disecando, buscando, calculando y deambulando montada en el viento, todo al mismo tiempo, lo cual puede
determinar que dos mundos se fusionen en uno: el mundo real y el mundo de la imaginacin, de las posibilidades.
Las respuestas que esta actitud mercurial provoca en la Cabra son mltiples y consecutivas. Al principio,
reacciona con excitacin. Despus de un tiempo, la excitacin se transforma en aprensin. Nada de lo que ella
dice y hace tiene sentido para l, desde un punto de vista lgico, prctico. Finalmente, su aprensin se troca en
severidad, y entonces l se desconecta. Una vez que Capricornio ha decidido que un tema no es digno de
discusin, ya basta. Puede ser brusco, cortante y duro. No hablaremos ms de esto. El tema est agotado.
Para la chica Gminis un tema nunca est totalmente agotado. Siempre se presta a nuevas discusiones, a

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nuevos enfoques. Sin embargo, no obstante su gran simpata, le resultar difcil reencauzar a la Cabra, cuando
sta se ha desconectado.
La circunstancial actividad frentica de Gminis puede parecerle frvola a Capricornio. Ella exhibe una
aparente falta de apego en su compromiso con la vida. Pero l encontrar suficientes causas para admirarla
cuando estudie la forma asombrosa en que funciona su mente, desatando nudos con la mayor facilidad y
hallando sin esfuerzo la solucin de problemas intrincados. Y. por lo menos al principio, ella respetar su
sabidura, totalmente distinta de su propio intelecto y sagacidad vertiginosos. Esto tender entre los dos un
vnculo de anhelo, que puede ser al mismo tiempo purificador y vigorizante. Sin embargo, despus de un
tiempo, es posible que las diferencias esenciales de sus respectivas naturalezas asuman una mayor visibilidad.
Capricornio tiene una cierta seriedad que puede deprimirla, y en la idiosincrasia de ella hay una curiosa
versatilidad que puede ofuscarlo. A menudo sus temperamentos, personalidades, caracteres y motivaciones
estn separados por grandes distancias.
Tomemos sus respectivas familias. Si l es un Capricornio tpico, est muy ligado a mam, pap, la ta, el
to Hymie... y una legin de primos. No, no me olvid de los hermanos. Cmo podra olvidarlos, cuando
estn tan presentes? Cuando no estn presentes, l habla de ellos. Si ella es una Gminis tpica, tal vez quiera
sinceramente a sus familiares, e incluso es posible que sea afectuosa con ellos, pero de una manera etrea,
informal. No se siente tan apegada a los lazos familiares como la Cabra. Ella marcha por sus mltiples
caminos, ellos marchan por los suyos, y si los unos y los otros se cruzan de cuando en cuando... estupendo!
Si ella no se deja sofocar por sus propios parientes, obviamente no le regocijar que los de l anden rondando
siempre por all y sean el tema principal de conversacin, aun cuando estn ausentes.
Sumemos a esto su actitud respecto del dinero. Les gusta a ambos. Ninguno de los dos tiene nada contra el
dinero. Pero ella lo utiliza para repartirlo en torno, para gastarlo y disfrutarlo. l lo usa como una especie de
sedante. Mientras sabe que est en el banco, puede distenderse y respirar con tranquilidad, confiado en la
certidumbre de que es un ciudadano cabal, al que no pueden ocurrirle desastres financieros imprevisibles.
Capricornio opina, respecto del dinero, lo mismo que el rey de los yacimientos de oro Winfield Scott Stratton
pensaba acerca del metal precioso: el lugar ms seguro para guardarlo est bajo tierra. A juicio de
Capricornio, el lugar ms seguro para guardar dinero es el banco. La mujer Gminis no entiende para qu
sirve dejarlo dormir all, sin hacer nada, cuando es posible gastarlo. Intereses, querida. Rinde intereses.
Entonces es posible que ella exclame, con uno de sus sbitos arranques mercuriales: Pero slo sirve para
multiplicar el dinero, que se queda durmiendo all, sin hacer nada. Por qu dice sin hacer nada? Acaso
no trabaja? Y adems le produce a l una sensacin de paz espiritual. A ella le produce una crisis de
frustracin.
Cuando el hombre Capricornio est ofuscado, enfadado o disgustado, se enfurrua, adopta un
comportamiento silencioso y hosco. Y cuando ella se encuentra en el mismo estado, puede ser custica,
amarga y sarcstica. Los estados de l son de colores marrn oscuro, ndigo, negro y azul, pero tambin son,
hasta cierto punto, predecibles. Los de ella nunca lo son. En determinado momento puede ser tan
plcidamente regocijante como una brisa primaveral, y un momento despus tan destructiva como un tornado.
Al principio puede ser incansablemente activa, y luego pasiva y taciturna. Sonre, y sus ojos expresivos
irradian un encanto mercurial. Fascinante. Una arruga surge de la nada y le atraviesa la frente. Ahora le brota
una lgrima en la comisura del ojo. Le tiemblan los labios. Es bella cuando est triste. De pronto s le ocurre
una idea alegre, se incorpora de un salto, le echa los brazos al cuello y le estampa un beso en la nariz. Sus
humores verstiles son tan fugaces como los de Campanilla de Cobre: pura fantasa frvola, como una
mariposa, y despus lgica y concisa, sucesivamente, en rpida progresin... primero profundamente
intelectual, y despus totalmente abstracta, casi mstica. Pero su ensoacin no dura mucho. Gminis tiene
demasiados elementos de escepticismo nato para ser autnticamente mstica.
De cuando en cuando, tropezamos con un capricorniano al que le encanta resolver misterios y descifrar
enigmas, y esta Cabra seguir a las Gemelas por los senderos y atajos retorcidos y tortuosos de Mercurio con
abrumadora fascinacin. Ella se parece a las piezas multicolores y dispersas de un rompecabezas, a la espera
de que alguien las ensamble. Adems, es delicada y femenina, tiene una risa alegre, y luce bien, cogida de su
brazo. A los capricornianos les gusta tener una mujer de esas que uno puede exhibir con orgullo delante de los
dems. El hecho de conquistar el amor de una criatura tan excitante es en verdad un logro, un triunfo nada
despreciable, y los regidos por Saturno son muy aficionados a los logros y los triunfos. La Cabra debe trepar.
Los capricornianos disfrutan del paisaje que se contempla desde la cima de la montaa. Les agrada que los
admiren y los respeten. Ostentar una esposa o amante Gminis (en el caso de l probablemente se tratar de

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una esposa), que es varias mujeres a la vez, y todas ellas seductoras, hermosas, talentosas, espabiladas y
femeninas, es algo que despertar la envidia de los hombres menos afortunados. Pero deber recordar el
consejo astrolgico en virtud del cual, no obstante su deliciosa feminidad, ella tiene una mente masculina.
Esto es algo que le harn recordar en ms de una ocasin.
Hay capricornianos que espordicamente brincan al bailar jubilosamente, sobre todo en la edad madura,
cuando tratan de recuperar lo que nunca descubrieron en la juventud, o lo que no buscaron por timidez, o lo
que no disfrutaron porque estaban demasiado atareados triunfando y trabajando... as como hay Cabras de
movimiento ms rpido, ms verborrgicas, ms descuidadas que cautelosas. Pero stas son decididamente
excepciones a la regla de Saturno. La mayora de las Cabras son modelos de circunspeccin. En verdad,
inicialmente sus proposiciones romnticas son tan trmulas y cautelosas, tan lentas y deliberadas, que al
principio ella inclina la cabeza a un costado, como si estuviera escuchando un susurro. Probablemente l
estar vestido con ropas discretas y de buen gusto, le sonreir con una expresin peculiarmente atractiva,
perezosa, y su dulzura y su estabilidad apaciguadora estarn combinadas en las dosis justas para intrigarla y
hacerle pensar que este hombre s que la entender y no se enfadar con ella.
l parece dichoso de complacerla, conmovedoramente agradecido de tener una mujer a quien contentar.
Lo regocija estar enamorado, y ella intuye que se trata de un hombre que no ser infiel a sus juramentos, una
vez comprometido. Es a esta altura, infortunadamente, cuando es posible que empiece a ponerse nerviosa. Se
trata del efecto de la palabra comprometido. A Gminis no le gustan ni las insinuaciones de compromiso. Si
el amor es autntico, durar. Preferira que sea as, por supuesto, pero a ella no le agrada firmar contratos a
largo plazo en cuestiones de romance. Hay que dejar que ste se desarrolle solo. Si resulta una relacin eterna,
estupendo! Pero pedir garantas pretender garantas no concuerda con la forma en que Gminis juega el
juego.
En el aspecto fsico, es posible que se sorprendan el uno al otro al intercambiar una comprensin instintiva de
anhelos mutuos. El sexo no es, para ninguno de los dos, algo afn a las llamas ardientes de la pasin
incontrolable. Tanto Capricornio como Gminis buscan la unin sexual como un medio para alcanzar el
sosiego y la comodidad. Normalmente, no tendrn demasiadas exigencias emocionales el uno con el otro. Sin
embargo, en algunas ocasiones espordicas l necesitar hacer un despliegue fsico, juguetn y afectuoso, de
grandes abrazos y cosas parecidas, pero no encontrar en ella la reaccin apetecida... la mujer Gminis
necesitar palabras de amor, expresiones verbales destinadas a estimularla para emprender el acto sexual, y no
las escuchar.
Exceptuando estas reas de posible descontento y ligera frustracin, los dos podrn compartir sexualmente
su amor con placentera compatibilidad. Como la vibracin 6-8 influye fuertemente sobre su convivencia, es
posible que el sexo sea un factor dominante, o por lo menos muy importante, en su relacin, y posiblemente l
la habr magnetizado al comienzo con un fuerte atractivo fsico, que es difcil que se disipe mientras
permanezcan juntos. Y es probable que, para sorpresa de amigos y parientes, permanezcan juntos
definitivamente, sobre todo si existe una conjuncin o un aspecto sextil o trgono Sol-Luna entre sus
respectivos horscopos. Aun sin esta ayuda planetaria, es probable que sigan siendo amigos despus de
separarse. Esto no les sucede a todas las parejas de la vibracin 6-8, pero es muy probable que s les suceda a
las Gemelas y la Cabra.
El amor se las apaa para derretir el hielo del corazn regido por Saturno. Hay algo en este hombre, una vez
derretido, que la har estremecerse de anhelo ante la imagen de absoluta adecuacin que proyecta cuando est
con ella: la promesa de alcanzar el colmo de la dicha mediante su relacin. Es posible que ms tarde ella
piense que la Cabra no ha cumplido su promesa tcita, a medida que la vida empieza a parecerle montona a
la mujer Gminis, que se siente encadenada a la existencia un poco mundana, pero segura, de Capricornio.
Igualmente, ella no debera olvidar que entre todos los amantes y maridos l es el candidato con ms
probabilidades de ser excitante en la tercera edad, de rejuvenecer, de tornarse ms libre (ms parecido a ella)
a medida que envejece. Si ella espera, es posible que aquella promesa de adecuacin se cumpla, al fin y al
cabo.
Gminis es impaciente y no le gusta esperar. Pero debera hacer el esfuerzo, porque si lo hace, las
recompensas valdrn la pena, y es posible que ella descubra junto con l un gran secreto: que en la
interrupcin del movimiento inquieto se puede hallar la forma y la configuracin autnticas del amor, y se
puede revelar su belleza ms ntima. Y la belleza es lo que busca desde que era nia su corazn escindido.
Paciencia. Cuando se trata de este hombre, la palabra clave es: paciencia. Ella debe cultivarla.
Es posible que una chica Gminis enamorada de una Cabra lea esto y se pregunte por qu habran de

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necesitar semejante consejo. Son tan felices... en este preciso momento. Bueno, no se le ensea a nadar a una
persona que se est ahogando. Se le ensea anticipadamente... por si acaso. Una vez ms, Gemelas, la palabra
clave es PACIENCIA.

Hombre GMINIS Mujer CAPRICORNIO


Atrs, seora, no permitir que nadie me atrape y me convierta en hombre...
Ella tuvo que decrselo.
Soy mayor, Peter. Tengo muchos ms de veinte. Crec hace mucho tiempo.
Me prometiste que no lo haras!
No pude evitarlo.
La mujer Capricornio no puede evitar ser ms sensata de lo que le corresponde por su
edad, as como el hombre Gminis no puede evitar ser de cuando en cuando un chiquillo irresponsable. En
nuestra sociedad, hasta hace muy poco tiempo, se supona que el hombre deba ser el fuerte, el maduro y el
prctico. La gente esperaba, en cambio, que la mujer fuera inconstante, un poco imprevisible e indefensa.
Ahora que los grupos de Liberacin Femenina hacen repicar fuertemente en nuestros odos las campanas de la
Nueva Era, podemos permitir que l sea circunstancialmente sensible, verstil y frvolo... y que ella sea
estable y sensata. Pero antes del despuntar de la era de Acuario, habran estado condenados.
Es una suerte para la Cabra y los Gemelos que finalmente le hayan reconocido a ella el derecho a ser
prctica e inteligente, al mismo tiempo que le han reconocido a l el derecho a soar despierto,
ocasionalmente, e incluso a sollozar cuando lo conmueve la belleza. Es una suerte para todos nosotros, pero
especialmente para estos dos. Ya es bastante complicado lidiar con sus diferencias de personalidad... qu
falta hace un problema adicional como lo es el de tratar de acomodarse las imgenes predeterminadas y
prejuiciosas que alguien se ha forjado acerca del hombre y la mujer? A Gminis y Capricornio no les hace
ninguna falta. Ya estn bastante atareados con el complejo pasatiempo de capturar la armona de la
compatibilidad entre sus dos naturalezas divergentes.
El sexo de estos dos signos solares es el que debe ser, a primera vista. El signo de ella es femenino, el de
l es masculino. Esto es, bueno... no es tan sencillo. Claro que Capricornio es un signo femenino, pero lo rige
el viejo Saturno, que es francamente masculino, hasta las ltimas consecuencias. Y Gminis es un signo
masculino, pero lo rige el taimado Mercurio, el Gran Simulador, un planeta famoso por su aficin a engaar,
capaz de trocarse de masculino en femenino, y luego nuevamente en masculino, en el lapso que dura el guio
de una lucirnaga. O sea muy rpidamente. Alguna vez intentasteis medir con un cronmetro cunto dura el
guio de una lucirnaga? As que tendrn problemas. No insuperables, pero s fastidiosos, de vez en cuando.
Quiz sera ms correcto definirlos como frustrantes.
Tal vez en algunos momentos l la acusar de ser insensible e incomprensiva, y en otros ella lo acusar de
ser veleidoso y emocionalmente inmaduro. En cierto sentido, ella es lo que la acusan de ser... as como, hasta
cierto punto, l posee esos otros rasgos. Sin embargo, la mujer Capricornio tambin puede ser afectuosa, leal,
y un verdadero arco iris crepitante de humor cuando siente que pisa tierra y no las arenas movedizas del
cambio constante, que pueden abrirse y devorarla. (Todas las Cabras tienen un miedo subliminal a los
terremotos.) As como el hombre Gminis puede irradiar una verdad ms refulgente que la que ella imagina,
siempre que le concedan la libertad de expresin que necesita, y que no lo acosen con recelos, con
predicciones deprimentes del futuro... y con reproches. Las crticas y la severidad emocional nunca sacarn a
relucir lo mejor de los Gemelos.
La mantis religiosa es un insecto extrao, en la medida en que la hembra devora a menudo la cabeza del
macho durante el acoplamiento. l lo ha ledo en alguna parte (los Gminis lo han ledo todo), y se siente
personalmente como un mantis cuando la mujer que ama insiste en devorarle su confianza en s mismo con
una desaprobacin rgida, implacable, al mismo tiempo que le jura amor.
Tal vez sea ella la que deba manejar el dinero en la familia. Es probable que la familia exista, eventualmente,
si ella puede hacer valer su opinin. Es raro que Capricornio se preste para interludios romnticos de

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naturaleza temporal. Generalmente deja bien sentadas las intenciones para el futuro antes de especular o
retozar. Pero volvamos al dinero y a la probabilidad de que ella sea la ms indicada para controlar el
presupuesto. No es que l no sea rpido y sagaz con los nmeros... a veces demasiado rpido y sagaz. La
mayora de los Gminis pueden hacer que una computadora se ponga verde de envidia.
Pero ocurre que ella tiene la virtud de gastarlo con ms prudencia, de invertirlo con ms sensatez, y disfruta
de una especie de toque mgico para incrementar cada vez ms el saldo bancario, en tanto que l posee la
virtud de reducirlo cada vez ms. (A menos, por supuesto, que la Luna o el ascendente de l est en Virgo,
Tauro, Capricornio o Cncer.)
Es curioso que la astrologa para no hablar de los amigos y parientes sostenga a menudo que estos
dos signos solares son emocionalmente fros. Ella, en razn de que est sometida a la helada regencia y la
severa influencia de Saturno. l, en razn de que pertenece al elemento Aire siempre un poco desapegado.
Pero, sin embargo, ella es capaz de manifestar un amor terrenal, incluso apasionado, a pesar de que Saturno
ejerce un control de hierro sobre sus emociones y la exhorta constantemente a no desahogarlas mientras no
est segura de que la relacin es genuina y tiene posibilidades de hacerse permanente.
En cuanto a l, an no ha aprendido, en el sentido espiritual, el autntico xtasis del amor... ni su
angustia. No ha experimentado, en el plano esotrico y krmico, su verdadera profundidad. Sin embargo, lo
anhela con un tipo especial de excitacin, y acaso el anhelo no es tambin mgico? Lo es, y la bsqueda
entusiasta que l emprende puede hacer que los sueos de ella se disparen, mientras la variante sosegada del
amor capricorniano ilumina, como la llama estable de una vela, el camino para esa bsqueda, y le suministra
un refugio reconfortante durante los perodos en que se encuentra dudando de s mismo.
A veces la mujer capricorniana puede ser tan buena, tan perfecta, tan fiable, que el hombre Gminis no
sabe qu hacer con ella. l se siente atrapado en la prisin, de esa misma estabilidad emocional,
inexplicablemente, como si la devocin de ella fuera una afrenta... pero slo porque l sospecha que no est
en condiciones de emularla, lo cual lo asusta y lo aflige, simultneamente. Y por tanto es posible que a l le
fastidie secretamente la fiabilidad de su afecto, y que huya, quiz, fugazmente, para volver luego a disfrutar
de ste. He aqu otra faceta de su confusin gemela en asuntos del corazn.
En razn de sus proclividades (y aversiones) naturales, es posible que su relacin sexual no sea siempre un
volcn en erupcin. Sin embargo, curiosamente, es posible que satisfaga el deseo de ambos en lo que
concierne al acto del amor fsico, a saber, que ste sea reconfortante y carioso, pero no devorador. Incluso
durante sus momentos de mayor intimidad, l necesita sentirse independiente y libre. Ella tambin, aunque
parezca raro. Dado el firme control que Saturno ejerce sobre ella, es improbable que la capricorniana se
entregue a la pasin con alguien, ntegra y totalmente. Tampoco el hombre Gminis, que es, en el fondo, dos
hombres. Uno observa la asociacin emocional mientras se mantiene distante de ella, y el otro experimenta.
As es como aprende el signo solar Gminis, en el nivel de conciencia de Mercurio. Igualmente es posible que
esta mujer lo atraiga fsicamente, sin que l consiga explicar cmo. Para l, Capricornio representa la octava
casa astrolgica del misterio sexual, as como los secretos ms recnditos de la vida y la muerte.
La chica Cabra tpica vive en un mundo sereno, tradicional, de actividad prctica, donde la sensatez
es reina. El vive en un mundo encantado, poblado por una mirada de fantasas, bullente de actividad mental,
donde la curiosidad es rey. Puede ser un experimento encantador y una experiencia beneficiosa que cada uno
visite el mundo del otro, de cuando en cuando, no para criticarlo y encontrarle defectos, sino tal como uno
visita un reino lejano, para disfrutar de su exotismo y su belleza, aunque satisfecho de poder volver despus al
entorno familiar.
Si viajan mucho l ser ms feliz. Ella no lo ser tanto (a menos que su Luna o ascendente est tambin en
Gminis, o en Aries, Leo, Sagitario o Piscis). Esta no es una mujer capaz de levantar una tienda y tomarla por
hogar. En razn de su proceso de maduracin invertida un don de Saturno a medida que envejezca se
har ms andariega, y es posible que la mencin o la idea de un viaje la excite, le suavice la mirada y le
levante el espritu... mientras est segura de que el viaje o excursin la traer finalmente de regreso a casa.
Aunque hay un grupo de profesionales capricornianas, sta sigue siendo una dama que se siente
esencialmente ms dichosa cuando est junto al fuego de la chimenea, como un grillo, que cuando lleva la
vida de una nmada o gitana.
El hombre Gminis tampoco es enemigo de sentarse y soar frente a la lumbre, excepto cuando lo atacan
peridicamente sus ansias trashumantes, sin aviso previo. Puede desempear durante meses o aos el papel

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del perfecto hombre de familia, y entonces, zas!, sopla una brisa primaveral, o incluso un viento invernal,
que los arrastra a l y a sus ensueos a una nueva aventura, aunque slo se trata de un viaje a una ciudad
vecina, donde puede perderse durante unos pocos das para volver a reencontrarse consigo mismo.
Tal como sucede en muchas configuraciones de signos solares 6-8, es probable que stos dos se hayan
conocido slo cuando alguien los present o los reuni de alguna manera. Es raro que Gminis y Capricornio
graviten el uno hacia el otro magnticamente, por su propia iniciativa, a menos que el Sol de ella haya estado
en aspecto trgono con la Luna de l a la hora del nacimiento, o viceversa, o ambas cosas. Sin embargo, una
vez que se ven, empieza a actuar entre ellos la vibracin 6-8, cuya intensidad aumenta sistemticamente.
El hombre Gminis puede ser muy locuaz, pero a menudo slo emplea su chchara como camuflaje.
Piensa que de todos modos la gente nunca creera la verdad desnuda. sta es demasiado obvia. Y por eso la
disfraza. S que esto es desconcertante, pero casi todo lo es, en Gminis. Un poco de esto y otro poco de
aquello. Tomemos por ejemplo al Gminis Bert Lance, ex director de la Oficina de Administracin y
Presupuesto del gobierno Carter, al que lo obligaron a renunciar en medio de un escndalo relacionado con
sus anteriores actividades bancarias objetables. En un discurso pronunciado en la convencin de la American
Bankers Association, en Florida, poco despus de su renuncia, uno de los miembros de la institucin afirm
colricamente que Bert Lance ha hecho por la actividad bancaria lo que el estrangulador de Boston hizo por
el vendedor a domicilio.

En cambio, hay decenas de banqueros respetables de todo el pas que siguen admirando y defendiendo
tenazmente al Gminis Lance, no por razones personales ni en retribucin de favores recibidos, sino slo
porque piensan sinceramente que su comportamiento profesional fue siempre imaginativo, creativo, valeroso
y totalmente acorde con los sanos principios de la actividad bancaria. Obviamente analizan a dos hombres
distintos. Bert Lance. Y su Gemelo, Bert Lance. Los Gminis nunca tienen personalidades simples. Tomad a
Henry Kissinger. Tomad a Errol Flynn. Tomad a Brigham Young. Tomad a estos seis hombres Gminis... y
con qu os encontris? Con imgenes dobles, que reflejan todas las facetas del sol y la sombra... que
despiertan desdn, odio, envidia, desaprobacin, temor reverente, admiracin, respeto y amor. Esto es lo que
le espera a la Cabra con los Gemelos que tiene por amante o marido.
La verdad mercurial de los Gemelos siempre se puede observar desde dos puntos de vista opuestos. Pero
Capricornio es proclive a la honestidad absoluta, lo cual deja poco o ningn margen para una verdad de dos
caras. Es posible que Gminis intuya que la actitud de la Cabra es demasiado severa, porque la continuidad de
la libre circulacin de las ideas de l depende de que, de cuando en cuando, queden puertas abiertas para la
interpretacin individual. El no sabe de dnde provienen sus ideas, pero stas no se interrumpen nunca, y son
la esencia de su ser. Sofocar su libertad de pensamiento y de expresin no es la forma de amarlo.
Ella querr que l busque una profesin o carrera con perspectivas futuras, y con un razonable beneficio
econmico presente, y probablemente insistir en que, tarde o temprano, compren su propia vivienda. El
capricorniano no es partidario de los edificios de apartamentos o los condominios que parecen hormigueros.
El no necesita en verdad este tipo de seguridad, porque normalmente Gminis no aspira a echar races. Es ms
feliz con un milln de dlares en papel moneda y cien en el banco que con cien dlares en papel moneda y un
milln en el banco. La primera situacin es ms estimulante. Ella piensa exactamente lo contrario. Gminis
siente que sus ideas y su imaginacin son sus bienes ms negociables. No entiende, realmente no entiende. y
quiz no entender nunca, ese tipo de seguridad que necesita ella. Incluso el hombre Gminis con un signo
lunar o ascendente Virgo, Cncer o Capricornio, ms cauteloso, invertir un da, sbitamente, sin aviso
previo, todo su saldo bancario, en una nueva idea, o en un nuevo sueo, objetivo o proyecto que aflor en su
cabeza. (En una de sus cabezas.)
Si su relacin empieza a resquebrajarse, a la chica Cabra no le resultar fcil desprenderse de l. Cuando una
mujer Capricornio se entrega por completo a un hombre, le cuesta mucho recuperar lo que dio. Ella no puede
cambiar tan fcilmente como l. Cuando ama, se propone que eso sea definitivo. Pero siempre y cuando
decida que lo definitivo ha entrado en un callejn sin salida, generalmente no habr escenas histricas de
llanto y acusacin, ni excesivas demostraciones emocionales. Sencillamente dar media vuelta, ocultar sus
lgrimas, se alejar y no volver. Ningn signo solar puede ser tan poco sentimental (superficialmente) como
Capricornio, cuando es necesario practicar una amputacin emocional y no hay otra solucin viable. Pero...
mientras se aleja, su tierno corazn se estar desintegrando, y su martirio ser tanto ms doloroso cuanto que

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lo retiene dentro, y lo soporta sola.


El hombre Gminis exclama, como Whittier: Cun poco he obtenido... qu descomunal es lo
inasequible!, y despus llora por las experiencias perdidas, por las oportunidades derrochadas, por las
posibilidades arrojadas por la borda... por el amor no correspondido, mal encarrilado, o que uno dej perder
en la nada. Sin embargo, enseguida aflorar la sonrisa triangular y la carcajada fluctuante de Mercurio. El
maana es un nuevo da deslumbrante, promisorio! Quin sabe qu le puede reservar? Tal vez... s, tal vez...
incluso la reconciliacin... la disculpa de su tmida chica Cabra, y la oportunidad de volver a probar, tratando
esta vez con ms ternura el corazn de ella.
Si su relacin amorosa o matrimonio caducara, la capricorniana tardar ms en sonrer, y en cuanto a la
posibilidad de que el maana sea ms deslumbrante... bueno, para su abatido espritu de Saturno el maana
parece estar a un billn de aos luz de distancia. sta es la razn por la cual ella pondr ms empeo en salvar
su relacin. Con la ayuda de Saturno, ella puede edificar un amor suficientemente fuerte como para resistir los
tornados espordicos de la desavenencia.

GMINIS

ACUARIO

Aire - Mutable - Positivo


Regido por Mercurio
Smbolo: los Gemelos
Fuerzas diurnas Masculino

Aire - Fijo - Positivo


Regido por Urano
Smbolo: el Aguador
Fuerzas diurnas - Masculino

La relacin GMINIS-ACUARIO
Los objetivos estn en cada extremo del arco iris...
Como sta es una configuracin de signos solares 5-9, y sus soles natales estn, por tanto, en aspecto
trgono, Gminis y Acuario son en general tan apaciblemente compatibles como un par de chinches en una
alfombra o dos termitas en un ttem. Sin embargo, de cuando en cuando, sus frecuencias pueden entrar en
cortocircuito, lo cual depende de otros aspectos entre sus respectivos planetas a la hora del nacimiento.
Hace poco tiempo recib una carta de un joven Acuario llamado William Dana Snyder, que trabaja en la
actualidad en la ferretera Nuts and Bolts de Greenwich Village. donde evidentemente est muy cmodo.
Estaba escrita en el tpico snscrito de Urano que emplean los Acuario cuando se comunican con los simples
mortales en el plano de la Tierra, y se hallaba firmada con la extraa frase: SAT NAM. Debajo de esta firma,
el Aguador haba traducido servicialmente las palabras, cuyo significado era, en esencia: Existe un solo
Dios, y l es la Verdad.
Ah est. La principal corriente de desavenencia entre los Gminis y los Acuario: la VERDAD. Gminis la
elude continuamente, porque, para los Gemelos, la verdad tiene una intrincada red de significados complejos.
Los Acuario la buscan constantemente (o la acechan): lcida, simple, limpia de adjetivos imaginativos,
desprovista de opiniones personales. Para Gminis, la verdad es un inmenso ocano ondulado, coloreado por
los arco iris y rutilante, poblado por los peces de multifacticas verdades a medias, quiz, tal vez y
posiblemente. Para Acuario, la verdad es una gran gota brillante, configurada como un hecho concreto,
incolora, transparente, que el implacable ojo microscpico de Urano ve como ella misma y nada ms que ella
misma, vlgale Dios... y eso es lo que es, por supuesto. Recordis? SAT NAM.

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La escena se desarrolla en cualquier parte. Gminis y Acuario estn en extremos opuestos de un hilo
telefnico. El primero le ha prometido al segundo que le har el favor de despachar, por l (o por ella), una
carta muy importante.
Despachaste la carta que te entregu anoche?
despach. Nos veremos para almorzar juntos dentro de una hora, de acuerdo?
ACUARIO: Qu significa eso de que la despachaste? Ahora mismo est viajando rumbo a Saratoga?
GMINIS: Bueno, no... pero estar dentro de pocos minutos.
ACUARIO: Entonces no la has despachado. Por qu dijiste que s?
GMINIS: La verdad es que escrib la direccin, le puse un sello y me dispona a salir rumbo a la
oficina de correos, cuando son el telfono.
ACUARIO: La verdad es que an no has despachado la carta. Vuelve a telefonearme despus de echarla
en el buzn. Adis. CLIC.
ACUARIO:

GMINIS: S, la

Acuario es un signo fijo. Fijo significa obstinado, entre otras cosas. Si los comentarios del Aguador os
hacen evocar la forma en que Virgo y Sagitario buscan la verdad, escuchad de nuevo. En la actitud de
Urano hay una ligera y sutil diferencia. No s con exactitud cul es, pero se trata de una ligera y sutil
diferencia. En todo lo que hace Acuario hay una ligera y sutil diferencia respecto de la forma en que lo
dicen y lo hacen los seres humanos comunes. Los Aguadores no son comunes. Son extraordinarios. Y no
les sacaris nada con halagos. Pero volvamos al tema principal. La verdad es un contexto en el que obviamente se producirn disputas ocasionales entre Gminis y Acuario.
No todos entienden esta obsesin uraniana por la verdad, basada sobre hechos. A diferencia de los
Virgo, los Acuario no son detallistas en busca de la verdad. A diferencia de los Tauro y los Capricornio,
los Acuario no tienen un criterio cerrado. La mente de Urano siempre est abierta a todo, literalmente a
todo. Si el cerebro humano es capaz de imaginarlo o concebirlo, entonces es una posibilidad para Acuario,
por muy descabellado y ridculo que pueda parecer a la comunidad cientfica y/o a los profanos. SIN
EMBARGO (y he escrito SIN EMBARGO as premeditadamente), aunque los Aguadores aceptan con
criterio abierto que absolutamente todo es posible, slo elevarn una teora vigente a la categora de
verdad definitiva despus de haberse convencido de que la hiptesis es viable, verificndola mediante
hechos concretos. Ya veis entonces que son una mezcla curiosa de realidad y fantasa. Por lo menos,
espero que lo veis. Confo en que esto haya elucidado el problema. Estoy segura de que no lo ha
elucidado. Pero lo intent.
Si bien a veces miran la verdad desde extremos opuestos del telescopio, Gminis y Acuario, en cuanto
configuracin de signos solares 5-9, son en general inmensamente compatibles. Diremos que es ms
frecuente que lo sean y no que no lo sean? Empatizan, simpatizan, filosofan y fraternizan en la misma
longitud de onda electrnica, en el mismo rayo aural, en la misma frecuencia de vibracin, o como os plazca
llamarlo. Normalmente, no se dejan conmover por sus respectivos humores cambiantes, excentricidades,
altos, bajos, o desplazamientos laterales. Slo rara vez encontramos una pareja Gminis-Acuario cuyas
posiciones planetarias recprocas estn seriamente menoscabadas por aspectos comparativos de sus cartas
natales, y que, por tanto, se aborrecen activamente a primera vista, o se aburren mutuamente. Esto sucede en
todas las configuraciones de signos solares, incluso en la vibracin 5-9 generalmente apacible, pero con muy
poca frecuencia.
Como os he recordado muchas veces a lo largo de este libro, en otros captulos dedicados a Acuario, si
bien en astrologa se lo representa como el Aguador, ste es un signo de Aire, lo mismo que Gminis, y no un
signo de Agua. Entonces por qu se representa a estos individuos, se los simboliza, digamos, por una figura
arrodillada que vierte agua de un cntaro, si no pertenecen al elemento Agua sino al elemento Aire? No s por
qu. Comprendo que superficialmente no tiene sentido. Es totalmente ilgico, para no decir contradictorio y
absurdo. Pero claro que tambin lo son los Acuario: ilgicos, contradictorios y absurdos. Todos ellos estn
chalados, hasta cierto punto. Los Gemelos se cuentan entre las pocas personas que lo notan enseguida, porque
como se sabe ellos tambin estn chalados de cabo a rabo. Cuando Gminis y Acuario hacen el loco juntos al
mismo ritmo, la escena es bastante reconfortante. Nadie tiene que explicarse. La vida se simplifica. No, tal
vez ser mejor que me retracte. La vida nunca es simple cuando se trata de estos dos signos solares.
Interesante, fascinante, incluso mgica... pero, desde luego, nunca simple.
Uno de los espectculos ms notables y patticos o conmovedores del mundo es el que ofrece un nio con
sentimientos de adulto. Otro espectculo notable, pattico o conmovedor es el que ofrece un adulto con

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sentimientos de nio. Esto ltimo es lo que les sucede a todos los Gminis y Acuario, si son representantes
tpicos de sus signos solares. En realidad ambos viven en planetas ajenos a la Tierra, y slo se posan aqu a
ratos, durante perodos que pueden oscilar entre cinco minutos y varios das. Naturalmente, cuando se les
presenta una oportunidad se asocian, para poder conversar en el lenguaje cifrado de los no terrqueos. El
verdadero mundo de Gminis y Acuario se llama Feria, el reino o estado donde existen las hadas, descrito
por Tolkien como un lugar que contiene muchas cosas adems de elfos y hadas, y adems de enanos, brujas,
duendes, gigantes o dragones; contiene los mares, el sol, la luna, el cielo; y la tierra, y todas las cosas que hay
en ella: rbol y pjaro, agua y piedra, vino y pan, y nosotros mismos, hombres mortales, cuando estamos
hechizados.
Todos nosotros experimentamos trances fugaces de hechizo (con la posibilidad de extender su aspecto
fugaz). Pero Gminis y Acuario comprenden y utilizan esta posibilidad y estn casi continuamente
hechizados, llenos de temor reverencial y asombro, de la curiosidad del autntico nio Gminis, el prvulo,
y Acuario, la segunda infancia tal como lo describo en Los doce misterios del amor, en el comienzo de
este libro. Por tanto disfrutan de residencia ms o menos permanente en el reino de Feria. Los vemos pasar
entre nosotros, desde luego, pero estn realmente aqu, o acaso no parecen estar a menudo... en alguna otra
parte? En pareja, estos dos signos solares se mezclarn y fusionarn a veces casi como si fueran uno, despus
recuperarn por un tiempo sus actitudes individuales... y volvern a unirse flotando. Generalmente se trata de
una relacin que sopla como el viento, como la brisa, un poco desapegada, y aunque una controversia entre
ellos puede generar un torbellino pasajero de excitacin, semejante a una tormenta de verano, normalmente
sta no dura el tiempo necesario para poder producir verdadero dao.
Tanto Gminis como Acuario entienden la mayora de los temas y situaciones cabalmente, a fondo, pero
habitualmente Gminis puede transmitir esta comprensin a los dems con ms claridad que Acuario, porque
los Gemelos han sido favorecidos con el don de la locuacidad y la elocuencia... los Acuario con el don del
genio y la insania, ms o menos por partes iguales. Ambos son, empero, especialistas en frases tortuosas,
alucinadoras. Gminis hace juegos de palabras con un ateo cuando le informa que cualquier cientfico puede
contar las pepitas que hay en una manzana, pero slo Dios puede contar las manzanas que hay en una pepita.
Acuario comenta la conducta del inquieto Gminis observando custicamente que un tramoyista no deja
sombra, slo dudas. Qu ha dicho? Escuchad con ms atencin la primera vez. A Acuario no le gusta repetir
las cosas. Gminis las repite alegremente, pero nunca dice dos veces lo mismo. Con sus pasteles invertidos de
retrica y alteraciones entrecruzadas, Gminis y Acuario podran formar un excelente equipo para escribir
versos destinados a las galletas chinas en cuyo interior se esconden vaticinios de la suerte.
Si el Sol y la Luna armonizan en sus cartas natales, pueden formar una pareja deliciosa, que constituir
un enigma exasperante para los dems, si bien ellos se leern, recprocamente, como un libro abierto.
Incluso con un aspecto Sol-Luna negativo en sus horscopos, en razn de su Sol trgono, podrn empezar
por leer la ltima pgina del libro, resolver que no les gusta, y flotar jubilosamente cada uno en su propia
direccin, aunque tal vez volvern luego para retomar las cosas donde las dejaron, y quizs incluso para
escribir un final distinto, ms a su gusto. Con estos dos, es imposible formular predicciones.
La mayora de las personas estiman a Gminis y Acuario a pesar de ellos y no por ellos. Ambos son
demasiado complejos para el terrqueo medio. Pero generalmente slo irritan con su bullicio, y pocas
veces llegan a provocar clera. Si se pudiera poner msica a su chchara mutua, combinada con sus
rpidos movimientos de cabeza y de pies, seguramente la letra sera fascinante pero difcil de recordar.
Difcil de recordar, al menos, para el Aguador. Todos los Acuario son un poco distrados. No importa, la
mente de Gminis, semejante a una trampa de acero, puede despachar tarjetas de computadora, con datos
de memoria, a una velocidad suficiente como para cubrir las necesidades de ambos.
A veces ganan dinero juntos, y a veces lo pierden juntos. Ninguno de los dos es propenso a confesar si
lo perdieron o lo ganaron, porque ambos son capaces de reemplazar una palabra por otra, como lo hacen
con todas las polaridades, entendiendo cabalmente lo que muchos no entienden: que cualquier elemento
siempre contiene partculas del opuesto. Es muy probable que estos dos (que, dicho sea de paso, estaran
muy cmodos en el T del Sombrerero Loco) tengan en comn una cierta dosis de inters en la religin,
en los viajes a pases y territorios extranjeros, en las instituciones de educacin superior, en la experiencia
astral, en la juventud y los jvenes, en el cine, en los entretenimientos y en las empresas artsticas o
recreativas. O stas podrn ser, a la inversa, reas de tensin.
A menudo Gminis y Acuario parecen incapaces de desarrollar una relacin totalmente pacfica, no
obstante su empata innata. Si las cosas marchan demasiado bien, no son felices. La suya es una
compatibilidad excepcionalmente extraa. Pueden sustentar a menudo proyectos antagnicos y pueden

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ponerse recprocamente los nervios de punta. Sin embargo, tambin pueden divertirse mucho juntos,
mientras revolotean en rbitas simultneas para sembrar de flores la exhausta y vieja Tierra... dando
tumbos, contorsionndose, revolcndose y provocando a quienes no han sido favorecidos con vertiginosas
mentes de calculadora y una intuicin fulminante.
Gminis y Acuario son tan serios como el nacimiento y tan alegres como la muerte... y viceversa. En
cuanto al concepto espiritual de SAT NAM, Gminis tiene conciencia de que la verdad es distinta para cada
persona, y depende del grado de lucidez del individuo en un momento dado. Por tanto, si el nombre de
Dios es realmente la verdad, entonces es un Dios de muchas caras, un Uno mltiple.Acuario el an ms .sagaz, lleva la lgica -de Gminis un paso ms adelante, y les informa a los Gemelos que
existe una sola verdad, que se destaca por encima de los mltiples dioses-verdad del SAT NAM, y cuyo
nombre es AMOR. No slo el amor entre el hombre y la mujer, aunque ste es el comienzo, sino el amor
recproco de toda la humanidad masculina y de toda la humanidad femenina, y el amor de la una y la otra por
todas las criaturas vivientes... del bosque, los mares y el aire. Pues bien responde Gminis, animndose.
Ya veo! Ya veo! Entonces debe de haber una seora diosa, dos creadores, almas gemelas, de donde todo
esto fluya hacia quienes estamos aqu abajo!
Pero fue necesario que el Aguador les abriera los ojos a los Gemelos y les revelara la verdad suprema. S,
Gminis, el superinteligente, tiene que aprender mucho de Acuario, el Aguador de la sabidura. Es posible que
en su juventud Acuario firme las cartas con la frase SAT NAM. Pero al llegar a la madurez, el regido por
Urano las firmar con la frase EVOL NAM REH-SIH (El nombre de l y el nombre de ella es Amor, en
ingls y escrito al revs, desde luego, en el tpico estilo de Urano).
El cntaro sin fondo del Aguador contiene muchos de estos misterios maravillosos, y nadie puede
descubrirlos ms rpidamente que los Gemelos Gminis.

M ujer GMINIS Hombre ACUARIO


Ahora seguramente l iba a entender; pero ni pizca.
Peter dijo ella, vacilando, pretendes que me vaya volando contigo?
Por supuesto. Para eso he venido. Peter agreg con tono un poco hosco: Has
olvidado que sta es la poca de la limpieza de primavera?
Ella comprendi que era intil explicar que l haba dejado pasar muchas pocas de
limpieza de primavera.
La primavera nos atrae a todos, pero encierra un hechizo especial, inexplicable, para los signos solares de
Aries, Acuario y Gminis. La mujer Gminis, que es impaciente, puede crear su propia primavera cuando la
Madre Naturaleza la desilusiona. Llega una poca del ao en que la opresin helada del invierno parece
interminable. Ella no puede esperar la primavera un da ms. Y entonces vuela a Florida o California,
siguiendo al sol esquivo, y hace un milagro al adelantar la primavera, a su capricho. Mucho tiempo atrs,
cuando era una nia muy pequea, aprendi que hay muchos fenmenos mgicos que uno puede generar
cuando se desea la felicidad, y la mayora de estos fenmenos implican desplazarse, volar de aqu para all,
pero sobre todo... cambiar.
Ningn hombre entender mejor que un Acuario su obsesin por esta palabra. Oh, los hombres Aries, Libra y
Gminis tambin la comprendern, a veces, pero no de una manera tan emocionante como Acuario. El
Aguador naci para traer el cambio al mundo. Sin embargo hay una pequea contra, que debemos hacer notar.
l quiere que el mundo y todos los que lo rodean cambien, pero no sus propias actitudes bsicas, no la esencia
de l mismo. Es posible que cambien sus estados de nimo y sus modales, pero no el l-de-l. Recordad que
es un signo fijo. Al principio, en el primer amanecer del amor, revolotear alegremente con ella. Ms tarde, se
afianzar ms en su rutina. Claro que la rutina de Urano es siempre ms fascinante que las otras, pero para
una chica Gminis desbordante de ideas y posibilidades, una rutina es una rutina, y para su espritu exaltado

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no hay nada ms desmoralizador que un Aguador sentado junto al fuego en su cabaa, atascado en su rutina.
No s si me entendis.
Sin embargo, el solo hecho de que l pueda afincarse en el aspecto residencial o geogrfico, no debe
interpretarse de ninguna manera como una insinuacin de que es un hombre previsible. En lo que concierne a
su humor, sus expresiones y su talante, para no hablar de sus actividades, es tan impredecible como un par de
dados. En verdad, es un acto de justicia romntica que una chica Gminis quede hechizada por un hombre
Acuario: Durante tda vida ella ha estado revoloteando como una lucirnaga peripattica, cambiando
bruscamente de estado de nimo, haciendo gemir de frustracin a sus amantes o amigos en razn de su estilo
bastante impersonal de imprevisibilidad, tpico de Mercurio. Apenas se le con un hombre regido por Urano,
no le quedar otro recurso que tragar una dosis bastante copiosa de su propia medicina.
l la invitar a cenar y a asistir despus al preestreno de una nueva pelcula de Steve McQueen o Paul
Newman (generalmente tpicos favoritos de Acuario), y entonces, despus de que ella se haya cepillado el
pelo y se lo haya ceido con una cinta amarilla, se presentar en su puerta algo parecido a una rana, con un
traje de submarinismo y. aletas de inmersin. Qu es esto? Es l. Acaso pretende que ella vaya a practicar
surf? No. Ha cambiado de idea y ya no irn a cenar antes de asistir a la proyeccin de la pelcula. Ha
decidido que cenarn en casa de ella, y mientras ella guisa, l ir a pescar unas valvas para confeccionarle un
collar. An tendrn tiempo para ver la primera pelcula, siempre que ella se d prisa, enfre las coles y
caliente las lentejas. para que todo est listo para engullir cuando l vuelva de bucear en busca de conchas
marinas. Habr suficientes, abandonadas, esparcidas sobre el fondo del ocano. musita l... mientras se va.
El cangrejo ermitao no tarda en superar las dimensiones de su confortable morada y en buscar otra nueva.
Las conchas de las orejas marinas son hermosas, pero significan la muerte para stas a manos de las personas
que aniquilan la fauna ocenica para estimular sus voraces papilas gustativas.
Qu fue lo que dijo? l se lo explicar todo la desdicha de la cadena alimenticia ms tarde, despus de
la comida. La rana ya ha desaparecido, y slo ha dejado tras de s el chasquido. de las aletas, en el camino
que lleva a la playa. La vida y el amor con este hombre pueden ser delirantes.
Habr una manera de hacer creer a otras personas la locura, la hermosura de todo esto? Ninguna. La
forma en que estos dos se encuentran a menudo en el trance de sentir lo mismo al mismo tiempo es
alucinante. La mayora de las veces ella capta las tretas de l casi antes de que pueda ejecutarlas.
Naturalmente, esto lo electriza, porque al Acuario le encanta asombrar a la gente, y la sorpresa de encontrar
una mujer difcil de asombrar le plantea un desafo demencial. Como si un chiquillo caminara sobre las manos
en lo alto de un muro para impresionar a su amiga favorita, y sta bostezara y se pusiese a caminar sobre los
codos. En compaa de la chica Gminis, l debe superarse constantemente a s mismo.
Si por casualidad viven en las montaas o en el Medio Oeste, lejos de toda playa, ello no excluye el
tratamiento de shock de Urano. En lugar de que aparezca una rana en la puerta de ella, l pasar a recogerla
una maana en un escarabajo amarillo, con la imagen de Snoopy estarcida sobre el cap, y uno de esos
adhesivos que dicen BIENVENIDOS OVNIS en el parachoques. La noche anterior su coche no era gris? S,
lo era, pero ste es un radiante da de sol y de cielo azul. Es hora de cambiar de colores. Es posible que
sbitamente l decida dejarse la barba o el bigote, sin aviso previo, o si ya los tiene, se los afeita en forma
igualmente repentina, se calza un gorro de lana hasta las orejas, la abraza en la calle y le da un susto mortal.
No me conoces, cario? Soy el gigante Jolly Green y te adoro! Y cosas por el estilo.
Por fin ella entender lo que siente el espectador inocente al que alguien le asesta una noria gigante de
emociones y humores cambiantes. Es posible que esto incluso le ensee a mitigar su propia acrobacia mental,
y quizs an a llegar puntualmente a las citas. La fiabilidad y la confiabilidad son cualidades que ambos
podran cultivar con provecho. Tambin existe la posibilidad de que no se estabilicen el uno al otro, sino de
que, en cambio, se estimulen recprocamente a multiplicar sus cabriolas. De una u otra manera, ser divertido.
Estos amantes constituyen una configuracin de signos solares 5-9, lo cual significa que tienen muchas ms
probabilidades que las corrientes de descubrir que son almas gemelas, sobre todo si existe un aspecto SolLuna armonioso entre sus dos horscopos. Incluso si no se cumple este requisito, o si existe un aspecto
negativo entre sus luminarias individuales a la hora del nacimiento, encontrarn ms elementos en comn
entre los dos que con la mayora de las personas que ambos conocen.
Sera intil negar que de vez en cuando ella fastidiar e irritar la fijeza de l con su mutabilidad. Pero es
muy fcil perdonarla. Nunca ha habido en el mundo una persona capaz de excusarse tan maravillosamente

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como una Gminis. Realmente vale la pena que ella haga algo incorrecto, para verla disculparse. A veces l se
pregunta si ella lo sabe. (S lo sabe.) A los Acuario les resulta un poco ms difcil aprender el arte de
excusarse. Nunca a un signo fijo (Acuario, Tauro, Escorpin, Leo) le resulta fcil decir Lo siento. A la
mayora de ellos les produce tanto placer implorar disculpas como caminar descalzos sobre las brasas. As que
ella no debe esperar que este hombre incurra en semejante humillacin con demasiada frecuencia. Es algo que
lo asusta. Qu pretender ella a continuacin si l la echa a perder ahora con excesivas excusas? A los
hombres Acuario no les gusta que prevean sus actos. Ya os lo he advertido. Es aconsejable no olvidarlo.
La gente puede aburrirse tremendamente cuando lo nico que despierta su inters mutuo es el sexo. Este
hombre y esta mujer rara vez corren semejante riesgo. Gminis y Acuario siempre tienen tema de
conversacin, muchas cosas para ensearse el uno al otro. y lo ms hermoso de ello es que, la mitad del
tiempo, ni siquiera se dan cuenta de que estn aprendiendo. Generalmente el sexo no reviste una importancia
desmedida para este hombre y esta mujer. Tampoco es menospreciable, pero no ocupa el lugar prioritario en
su relacin. Casi nunca se le ocurre a uno de ellos medir su influencia, contar sus dones o sus calamidades. El
sexo est ah, eso es todo. La mayora de las parejas Gminis-Acuario bien avenidas disfrutan cuando
chapotean en los charcos, remontan cometas o cazan mariposas. Es algo emocionante, excitante, puro placer
desprovisto de complicaciones, sin recovecos oscuros o misteriosos: un recinto luminoso y soleado de sus
corazones. l podra ser uno de esos ocasionales Aguadores a los que casi es necesario recordarles las reglas
del juego del acoplamiento porque sus pensamientos ajetreados como abejas andan zumbando alegremente en
torno de otras cuestiones, demasiado preocupados y abstrados para recapacitar constantemente sobre los
deleites de la intimidad fsica. Y ella podra ser una de esas Gminis que alcanzan la plenitud mediante la
conversacin, mediante la unin mental, y no mediante una entrega exagerada a la sensualidad o la pasin.
Sin embargo, el acto amoroso, cuando se produce, suele ser satisfactorio para ambos y no una fuente de
tensin, independientemente de la mayor o menor frecuencia con que lo compartan.
Estos dos prevn sus respectivos deseos de una manera extraa. El hombre Acuario que tiene a Venus en
muy mala posicin en su carta natal, puede sustentar algunas ideas muy extravagantes en materia sexual, o
puede preferir la relacin amorosa platnica, que nunca termina de consumarse. Pero una vez que el uraniano
medio ha sido cautivado, y ha entregado su corazn, ya conoce el lenguaje del amor, incluido el fsico, y
puede comunicar la magnitud de su necesidad con una mirada fija, arqueando ligeramente una ceja... o
agitando la oreja izquierda. En cuanto a ella, el simbolismo gemelo de Gminis se reflejar asombrosamente
en su capacidad para aparecrsele una noche como una mujer especial, propia... y al da siguiente como otra
totalmente distinta.
Hablando del lenguaje, como lo hacamos pocos prrafos ms atrs; la chica-mujer Gminis (pues es las dos
por turno) puede hablar Ms de un idioma. Los son lingistas natos. Tambin es posible que tenga ms de un
nombre; un alias o un apodo, y quizs incluso ms de un marido durante su ciclo vital. Por supuesto, esto no
se aplica a todas las mujeres Gminis, pero s a la mayora de ellas. Las Gemelas pocas veces se conforman si
no lo tienen todo por partida doble o mltiple. Los Acuario tambin se casan, a menudo, ms de una vez. (No
siempre, pero s a menudo.) No todos los Aguadores satisfacen su curiosidad la primera vez, aunque ella le
lleva ventaja en la carrera de los matrimonios mltiples y tiene un poco ms de probabilidades que l de haber
probado anteriormente el matrimonio.
Una vez que el hombre Acuario est seguro de que no pierde nada por ello, puede ser cabal y
perfectamente fiel a una mujer. Su problema con las Gemelas consiste en que a veces tiene la impresin de
que est lidiando con dos mujeres. Supongo que podra serles fiel a ambas. Las mujeres Gminis flirtean
mucho. Sencillamente no pueden evitarlo. Pero en este caso ella se saldr casi siempre con la suya, porque
generalmente los Acuario no son propensos a recargar las tintas en materia de celos. Es posible que los coqueteos ligeros, amistosos, les pasen totalmente inadvertidos. l entiende la amistad. En verdad, posiblemente
ella deseara que no la entendiese tanto. Puede suceder que las amigas de l la pongan celosa a ella.
Simplemente deber recordar que al Acuario tal vez le resulte difcil separar el amor de la amistad, pero que
para l, si se trata de un Aguador tpico, el aspecto fsico o sexual de una relacin est asociado con el
primero, y no con la segunda... una vez que l ha separado los dos mediante un compromiso (o que los ha
combinado, con ella).
La nica persona a la que ella debe temer con justo motivo es la primera chica que l am. Nunca la
olvidar: nunca. Siempre estar presente, profundamente implantada en su memoria, ya se trate de su maestra
de primer grado, del gorila hembra del zoolgico, o del hipoptamo hembra que le hizo un guio cuando l
tena tres aos. Podra tratarse de algo ms serio, claro est, y su primer amor podra ser una autntica y

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peligrosa mujer de carne y hueso, que tal vez aparecer un da para hacerle revolcar el corazn. An as,
excepto en casos raros, l preferir el recuerdo brumoso, ensoador, al trajn de retomar la relacin donde la
dej, aos atrs. Sin embargo, esos casos muy raros tambin existen.
Lo nico que este hombre le exigir es la verdad. Y es lo nico que tal vez nunca obtenga de ella. Ella ve la
verdad a travs de la lente mltiple de la imaginacin, coloreada por sus deseos y ensueos. Es slo un
problema de interpretacin. Por lo dems, estos dos comparten vibraciones esencialmente similares. Sus auras
se amalgaman en una galaxia de estados de nimo, sincronizados en la frecuencia del mismo barco madre,
diferentes slo en la medida en que contienen el reflejo individual de las estaciones cambiantes del corazn.
Estas diferencias son sutiles, intrincadas. Las reacciones de l son ms complejas que las de ella, y por tanto
tambin lo son sus reflejos. Ella lo sorprende con torrentes de lgrimas, seguidos sbitamente por estallidos
deslumbrantes de risa. Entonces l invierte el reflejo con torrentes de risa, seguidos por estallidos
deslumbrantes de lgrimas... quiz porque Acuario ya sabe lo que a Gminis an le falta aprender: que existe
una razn por la cual alegra rima con melancola, razn esta contenida en su misterio personalmente an no
dilucidado de jbilo y pena, que en realidad son otros dos Gemelos, inseparables e intercambiables.

Hombre GMINIS Mujer ACUARIO


As que escap a Kensington Gardens y viv mucho mucho tiempo entre las hadas.
Ella lo mir con vehemente admiracin, y l pens que era porque
haba escapado, pero en realidad era porque haba conocido a las hadas.
Hay muchas razones por las que es seguro que estos dos se prestarn recproca atencin en una multitud, pero
la principal consiste en que ambos oyen un tenue acorde musical. La chica Acuario ha pensado siempre que
nadie la comprende de veras. La mayora de las personas la juzgan equivocadamente, suponen que juega slo
con la mitad del mazo de cartas, que tiene una imaginacin alucinada y desbordante, que es una florecilla loca
que ha nacido varios siglos antes de su tiempo. Todos menos l.
El hombre Gminis ha pensado siempre que nadie lo comprende de veras. La mayora de las personas lo
juzgan equivocadamente, suponen que no es de fiar, que unas veces es demasiado locuaz, que otras veces es
demasiado caprichoso, inmaduro... y totalmente irresponsable. Todos menos ella.
La primera toma de conciencia de la afinidad que existe entre Gminis y Acuario siempre me recuerda el
encuentro entre el Principito de Saint-Exupry y el piloto. En su infancia, el piloto haba dibujado una boa
constrictor que se haba tragado un elefante y que, infortunadamente, pareca un sombrero. Durante toda su
vida, cualquiera que fuese la persona a la que mostraba su dibujo, nadie reconoca a la boa constrictor que se
haba tragado un elefante, sino que todos comentaban siempre: S, es un bonito dibujo de un sombrero.
Cuando los dems no comprenden tus afanes te sientes dolorido, y solo. Hasta que un da, despus de haber
crecido, el piloto se encuentra en el desierto con un extrao hombrecillo que le pide que le dibuje una oveja.
Exasperado, el piloto bosqueja la misma imagen de su infancia, la que todos haban tomado siempre por el
dibujo de un sombrero. Pero cuando el Principito mira el bosquejo, menea inmediatamente la cabeza y dice:
No quiero un dibujo de una boa constrictor que se ha tragado un elefante. Te ped que me dibujes una
oveja.
ste es el ligero acorde musical al que me refiero. Sin una sola explicacin... alguien
sabe! Slo la msica, y nunca las simples palabras, puede describir la fuente de pura
alegra que brota en el alma cuando, despus de muchos aos de bsqueda intil y solitaria, uno encuentra a
otro ser que reconoce y comprende realmente (no aproximadamente, sino realmente) todos los anhelos
secretos y tentativas de comunicarse que los dems han ridiculizado o ignorado anteriormente.
Ms adelante, este primer ligero acorde de la msica de las esferas, aunque bello y largamente esperado,
contiene una o dos notas desafinadas, intercaladas en la sinfona de amor entre Gminis y Acuario. Pero ste
no es ms que un pequeo lastre cuando se lo compara con los ritmos fracturados y las melodas discordantes

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que ambos debieron soportar hasta que por fin se encontraron el uno al otro. Aunque ninguna relacin es
perfecta, una configuracin de signos solares 5-9 a menudo est ms prxima a serlo que la mayora de las
otras. Si los aspectos Sol-Luna entre ellos estn en conjuncin, en sextil o en trgono, pueden alcanzar una
rara armona en el vivir y en el amar. Incluso sin la ayuda planetaria, son ms compatibles que muchos otros,
y generalmente seguirn siendo amigos, perdure o no el romance.
Los signos solares que estn en aspecto trgono se 'complementan en condiciones que slo las personas
implicadas pueden valorar. Pero una de ellas siempre se adelanta a la otra en la rueda zodiacal, en el nivel del
alma, en las lecciones krmicas. En este caso, la mujer Acuario es un poco ms sabia, en un sentido
inconsciente, espiritual, que el hombre Gminis al que ama. De modo que le tocar a ella ser ms generosa y
tolerante. La tolerancia les surge espontneamente a la mayora de los Acuario, que son bsicamente
desprejuiciados y que conocen bien el significado de la frase: Ayuda a cruzar al bote de tu hermano y,
regocjate!, el tuyo propio llegar a la orilla. Urano les inculca el humanitarismo a los Aguadores, y le
infunde a la mujer Acuario un espritu fraternal. Es posible que ella tenga demasiados amigos, demasiados,
por lo menos, para los hombres nacidos bajo otros signos solares. Tal vez el hombre Gminis no encuentre
tiempo para indignarse contra los extraos pjaros que ella congrega en torno de s, porque est demasiado
ocupado con su propia actividad gregaria. Slo unos pocos geminianos, con graves desavenencias planetarias
en su horscopo natal, son misntropos. En el hogar del Aguador y el pjaro de Mercurio raramente reina la
paz. Si ambos son representantes tpicos de sus signos solares, la casa estar ms a menudo llena que vaca.
Estos dos cometern muchos errores mientras intentan amarse en la opulencia y la indigencia, para bien o
para mal. Pero sern errores interesantes, casi nunca aburridos. Es posible que l cometa el error de presumir
que ella tolerar sus pequeos embustes inocentes. Ella se indignar cuando l manipule la verdad o la
distorsione. Las mujeres Acuario suelen aducir que son veraces e intachables en todo sentido. Viven su vida y
nunca mienten, tanto si la sociedad las aprueba como si las censura. Pero el hombre Gminis es lo
suficientemente sagaz y astuto como para analizar la forma peculiar de deshonestidad que practica ella, y que
consiste en perpetrar pecados de omisin. Ella dice la verdad, es cierto... pero a veces slo parte de ella, slo
lo que desea revelar, y se reserva la verdad ntegra, sin jugar jams todas sus cartas al mismo tiempo. Cuando
l la acusa de proceder as, ella se muestra sorprendida y ofendida. Es posible que l le recuerde que tiene
otras tcnicas para no ser totalmente veraz, a saber, una manera de expresar sus autnticos sentimientos con
una fraseologa que casi nadie podra interpretar correctamente.
El juego de sinceridad que se desarrolla entre Gminis y Acuario es complicado, y quizs ellos son los
nicos que pueden desatar los nudos. A veces lo hacen. A veces, no. Nunca cesan de intentarlo. Ambos
disfrutan de los juegos mentales y son detectives aficionados, instintivamente alertas a todos los matices. Este
talento es obvio en Gminis y est ms encubierto en Acuario, bajo la mscara superficial de inocencia atnita
y de distanciamiento.
El error que ella podra cometer consistira en esperar que lo que l dice tenga el significado exacto que le
corresponde. Gminis utiliza las palabras como si fueran bendiciones para cautivar, estimular, persuadir y
engatusar, y a veces codo si fueran armas para mofarse, provocar y lastimar. Pronuncia discursos que la
magnetizan y cautivan su atencin, y que despus la hechizan... o puede destrozarle el corazn con su variante
mercurial de sarcasmos custicos y comentarios cortantes. Casi siempre es un error llorar delante de un
hombre Gminis. l no soporta las lgrimas. Las escenas emocionales vehementes lo asustan como a un nio.
Y entonces reacciona a menudo con las que parecen ser palabras fras y desconsideradas, que usa nuevamente
como armas, esta vez para protegerse del dolor que acompaa a la compasin.
Este hombre no quiere sufrir, si puede evitarlo. El arte de la stira lo invent Gminis, que entreteje
oraciones con las palabras de la misma manera en que el prestidigitador enhebra cuentas multicolores, extrae
otro conejo de su chistera, y otro pauelo flotante de su manga en el ltimo momento, arrancndole al pblico
un suspiro y una exclamacin de asombro. Hoy es feliz, maana es desdichado, y al da siguiente se muestra
jovial y exuberante. Sus emociones son genuinas, autnticas. Lo que sucede es que no duran. Generalmente la
chica Acuario puede tolerar sus humores cambiantes mejor que las dems mujeres, por una excelente razn.
La mitad del tiempo apenas lo nota. No nota nada. Veis esa expresin nebulosa, brumosa, distante, de sus
ojos? La ha adquirido navegando all lejos entre las nubes en su propia longitud de onda, en algn tramo del
futuro, momentneamente desconectada de la Tierra y los terrqueos, incluyendo los estados de nimo
gemelos de l. l puede pasar de la desesperacin suicida a la serenidad antes de que ella tome conciencia de
lo que ocurre.
En su juventud, la chica Acuario rodea a su amante de ensueo con un halo centelleante de imposible
belleza teida con todas las gamas del arco iris, halo ste que jams podra acomodarse a la cabeza y los

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hombros del hombre promedio, con la cantidad corriente de taras y defectos de carcter. Pero ella aprende a
ocultar su propia vulnerabilidad bajo el disfraz de una fra, desapegada y amistosa actitud de seamos buenos
camaradas, mientras se conforma con algo menos, sin dejar de acariciar en secreto, constantemente, las
ilusiones sentimentales de su juventud. Por tanto, cuanto mayor sea ella cuando conozca a Gminis, tanto
menos peligro correr de que ste la hiera con la ligereza de su comportamiento respecto del amor. El de ella
puede competir en ligereza con el de l... ahora. Casi todos los Acuario tienen esta extraa distorsin. Si se
casan ms de una vez, generalmente el matrimonio definitivo se concertar en una etapa avanzada de la vida,
cuando encuentren a alguien que necesite la sabidura de Urano. Entonces ella transformar a este hombre en
el amante astral de su adolescencia, y finalmente materializar dentro de los lmites de lo posible su ideal
primitivo de combinar el amor con la amistad.
El ltimo amante podra ser un Gminis, que tambin desea combinar el amor y la amistad y que es tan
proclive como ella a confundir los dos sentimientos.
Tanto el hombre Gminis como la mujer Acuario alimentan temores y dudas interiores sobre su atractivo
sexual. En algn momento del pasado ambos se preocuparon secretamente por algn problema relacionado
con la sexualidad, y quizs experimentaron la humillacin de que los llamaran frgidos o por lo menos
temporalmente insensibles, sobre todo si uno de ellos se lio previamente con un signo de Fuego, de Tierra o
de Agua.
Juntos, pueden demostrarse mutuamente la falsedad de estas acusaciones formuladas por ex amantes.
Gminis y Acuario tienden a dar slo tanto como se necesita y se espera. y pocas veces reclaman ms de lo
que se da, y por tanto logran a menudo un equilibrio feliz en la unin sexual. A menos que uno de ellos, o
ambos, tengan a Venus o Marte en muy mala posicin en la carta natal, obtendrn en su unin fsica una
mayor satisfaccin sexual que la experimentada anteriormente con ex amantes... probablemente que la que
podrn experimentar en el futuro con otros nuevos. Por supuesto. probablemente no es seguramente, pero
encierra una promesa ms firme que posiblemente.
No os disteis cuenta de que cuando erais nios, y pedais ir al circo, si un adulto deca que
posiblemente podrais ir, se os caa el alma a los pies, y si deca que probablemente podrais ir, el alma
se os levantaba un poco, y si deca que seguramente podrais ir el alma volva a su lugar, y vuestro corazn
palpitaba frenticamente de jbilo y gratitud y emocin? Tanto Gminis como Acuario son ms propensos a
la pasin del alma que a la de los sentidos, y comunican su amor por medios emocionales ms intrincados
que la simple entrega fsica a la sensacin.
Casi siempre, cuando se produce una ruptura en su relacin, estos dos pueden mantenerse casi tan
compenetrados y encontrar casi tanta afinidad mutua como al principio. Cuando Gminis y Acuario se
sienten heridos, los dos se refugian en una amistad segura, protectora, desprovista de exigencias
emocionales. La amistad es algo maravilloso, pero a veces Gminis y Acuario sacrificarn el amor por ella,
porque el amor exige ms fe y ms confianza que una relacin entre camaradas.
Entre este hombre y esta mujer existe un marcado misticismo, un hilo de luz reverberante que conecta sus
almas, si son autnticamente compatibles, como sucede en el caso de Aries y Leo, de Tauro y Capricornio...
y de todas las configuraciones de signos solares 5-9. Si les place, podrn tirar de este hilo para atraerse
nuevamente el uno hacia el otro. Por supuesto, no todas las vibraciones 5-9 corresponden a almas gemelas,
pero aquellas que s corresponden ayudan a que los compaeros del alma se reconozcan con ms facilidad y
disfruten de una comunin ms espontnea que la que podra ser concedida a los autnticos amantes regidos
por la influencia de otras configuraciones de signos solares.
Mientras l comprenda que cuando ella re es posible que est sollozando interiormente. y que cuando
llora es posible que se regocije interiormente... y mientras ella comprenda que l puede alejarse volando hoy
y retornar maana (o la semana prxima, el mes prximo o el ao prximo... pero que finalmente retornar),
experimentarn ms placer que dolor en su relacin amorosa. Juntos, Gminis y Acuario pueden hacer milagros, como el de fusionar varias realidades en una sola, hechizada. Entre ellos existe este vnculo de
sentimientos, esta locura compartida... y la soledad. Nunca confundiran sus respectivos dibujos de una boa
constrictor que se ha engullido a un elefante... con el dibujo de un vulgar sombrero.
Y es muy probable que estos dos, juntos, puedan convencer incluso a todas las boas de que no es correcto ni
natural que se engullan un paquidermo a la hora del almuerzo.

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GMINIS

PISCIS

Aire - Mutable - Positivo


Regido por Mercurio
Smbolo: los Gemelos
Fuerzas diurnas Masculino

Agua - Mutable - Negativo


Regido por Neptuno
Smbolo: el Pez
Fuerzas nocturnas - Femenino

La relacin GMINIS-PISCIS
Cuando sus voces se extinguieron, cay un fro silencio sobre la laguna, sucedido por un dbil
grito. Socorro, socorro! Dos pequeas figuras golpeaban contra la roca.
De nada servira fingir que Gminis y Piscis son signos solares tan compatibles, por naturaleza, como las
fresas y la crema, o como Oliver y Hardy. No todos, pero algunos de ellos, son tan incompatibles y tan
hostiles como lo han sido a lo largo de los aos los rabes y los judos, aunque quiz no tan violentos. Sin
embargo, as como la paz es posible y cada vez ms probable entre estos enemigos tradicionales, tambin
es posible un feliz compromiso entre Gminis y Piscis. Si existe entre ellos un aspecto Sol-Luna en trgono,
en sextil o en conjuncin, podrn entenderse muy dichosamente, siempre que Gminis consienta en nadar de
cuando en cuando a travs de las aguas de Neptuno para hacer compaa al Pez... y siempre que Piscis est
dispuesto a volar valerosamente, una que otra vez, junto a los pjaros de Mercurio.
A pesar de ello, un signo de Aire nunca est totalmente cmodo en el elemento Agua. Siempre existe
la posibilidad de ahogarse... as como a un signo de Agua le resulta un poco alarmante volar sin paracadas.
Alguien podra colocarse por favor debajo de m con una red, para atraparme si me caigo? Puesto que sta
es una configuracin de signos solares 4-10, si descubrieran un aspecto Sol-Luna negativo entre sus
horscopos, debern recordar que la mezcla de aire con agua se debe realizar con cuidado, y no con
negligencia. De lo contrario el resultado podra ser una niebla truculenta o incluso un smog peligroso. Es fcil
entender cmo es posible que esto produzca un efecto desalentador o sofocante (o los dos) en el mbito
comercial, en el seno de una familia, en una relacin amorosa o entre amigos. Indudablemente, es una
experiencia desagradable sentirse desalentado (como Gminis puede serlo por Piscis) o sofocado (como Piscis
puede serlo por Gminis).
GMINIS: Comprendes que cualquier cosa que digas ser utilizada contra ti? PISCIS: No me importa. Eso
me ha pasado siempre.
GMINIS: Deja de compadecerte a ti mismo. Te declaras culpable o inocente? Habla. Siempre callas. Eso se
llama estar enfurruado, y lo haces para fastidiarme.
PISCIS: Oh, me declaro culpable, por supuesto. Culpable de ser humano, de tener necesidades y deseos
humanos... incluso defectos humanos. Ests conforme?
GMINIS: Eso depende. Tienes ms defectos que la mayora de las personas. Careces de la facultad del
razonamiento deductivo. Evitas las controversias, te pones taciturno y te niegas a discutir las cosas. Tu
mente anda divagando. Ayer no me prestaste atencin en tres oportunidades distintas cuando te ped que
hicieras algo, y sigues desentendindote de ello. Corres de un lado a otro escuchando los infortunios de
los dems mientras tu propia vida se desmorona. Eres un masoquista y un moroso. Dejas todas las cosas
importantes sin hacer, mientras andas persiguiendo pompas de jabn y oliendo flores. Eso te hace feliz?
PISCIS: Oh, s! Nunca nadie ha sido ms feliz. Por favor cuida que el jurado, y tambin el juez, sepan cun
feliz he sido.
GMINIS: No empieces a hablar del juez y el jurado. sta no es una audiencia judicial y t lo sabes. Slo
estamos discutiendo.

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PISCIS: Lo siento... pero hablas como un acusador pblico.


GMINIS: No nos apartemos del tema. Dices que eres feliz. ste es otro de tus embustes de Neptuno. Es
obvio que en este momento ests triste. Evidentemente deprimido. Por qu ahora no eres dichoso?
PISCIS: Porque no hago dichoso a nadie... ni siquiera a ti.
(o...)
PISCIS: Lamento someterte a un careo, y te ruego que me perdones, pero... bueno, no confo en ti. Te tengo
miedo. No te das cuenta de que tus palabras pueden lastimar cruelmente? Vives totalmente ajeno al
hecho de que a veces eres despiadado y exageradamente crtico?
GMINIS: No ms que otros. Slo soy suficientemente elocuente como para enunciar mis pensamientos con
claridad, y para comunicar mis sentimientos. No me callo todo, como t. No soy hipcrita, como t.
PISCIS: S, es cierto. Eres inteligente. Manejas las palabras mucho mejor que yo. Incluso eres brillante, a
veces. Muchas veces. Pero... alguna vez has sido feliz? Quiero decir, has estado contento contigo
mismo, tranquilo? Lo has estado? Alguna vez?
(pausa)
GMINIS: Yo... esto, bueno... claro. Naturalmente. Por qu me lo preguntas? PISCIS: Quera saberlo. Qu
significa la felicidad para ti?
GMINIS: La felicidad? Qu significa para m? Es... bueno, es muchas cosas que t no entenderas.
PISCIS: Qu, por ejemplo?
GMINIS: Por ejemplo, saber exactamente a dnde voy, llegar all cuando lo tengo planeado... saber quin
soy y qu quiero.
PISCIS: Quin eres? Qu quieres?
GMINIS: Tratas de confundirme, deliberadamente. Por consiguiente, me niego a contestar ms preguntas.
Hay algunas cosas en las que Gminis y Piscis se parecen. Ambos dan una impresin general de ser esquivos,
de escaparse siempre de las manos, con un talento camalenico para el camuflaje, tan difciles de atrapar y
retener como las lucirnagas (Gminis) y los pececillos (Piscis). Sus maniobras mentales y fsicas (las de
ambos) son rpidas, vertiginosas y evasivas, y primeramente reverberan en la luz delante de vuestras narices,
y despus desaparecen. A dnde se fueron? Bueno, a cul os refers? El Pez acaba de meterse nadando
dentro de su profunda naturaleza emocional, para protegerse de otras preguntas, de otros padecimientos... y el
pjaro de Mercurio, por las mismas razones que el Pez, acaba de remontarse mentalmente hasta las nubes que
se agolpan sobre vuestras cabezas.
Habis odo decir que los Piscis son almas muy viejas. Yo misma os lo he repetido, muchas veces. Es
cierto. Lo son. Han pasado por el diluvio purificador de muchas encarnaciones, y lo entienden todo y a
todos... excepto a s mismos. El alma no puede llegar a la encarnacin de Piscis si antes no ha aprendido, por
lo menos una vez, las lecciones de los otros once signos solares. Como algunas almas permanecen en la
experiencia de un mismo signo solar (o vuelven a ella) durante muchas vidas antes de asimilar el lado positivo
de la esencia de dicho signo, ya veis por qu el Pez es un alma vieja. Tambin podis entender por qu el
Piscis enfrenta la ms difcil de todas las pruebas krmicas. Porque es aqu, bajo la extraa influencia de
Neptuno, donde las almas pueden deslizarse y resbalar, y olvidar algunas de las once lecciones aprendidas con
tantos sacrificios, en razn de lo cual se ven obligadas, entonces, a volver a un determinado signo (como si
debierais volver a estudiar gramtica, cuando creais haber aprobado la materia) o a renacer una y otra vez en
la misma vibracin de Piscis, hasta terminar de asimilarla.
No es raro que los Piscis sean gente tan rara. Como grupo, parecen abarcar slo santos y pecadores, y
prcticamente no hay un peregrino normal entre ellos. S, la experiencia de Piscis es la ms vulnerable, la ms
tentadora para los ngeles... la que tiene ms probabilidades de producir un ngel cado. .El Pez puede
desempearse muy bien en la escuela de Neptuno, hasta que un da olvida casualmente la generosidad que
aprendi mediante las encarnaciones de Aries, Sagitario y Leo, se convierte en un individuo mezquino... y
cae. O vive una plcida vida de ilustracin, hasta que una maana (o noche), olvida, como un amnsico, la
leccin de la equidad de Libra y juzga cruelmente a alguien... u olvida la vagamente recordada paciencia de
Tauro, y toma una decisin impulsiva que habr de lamentar amargamente, demasiado tarde. Ser Pez no es
precisamente divertido. A estos hombres y mujeres les exigen que sepan mucho. Todos deben ceirse al
cdigo de honor krmico, y cualquier cadete de West Point os podr explicar que el cdigo de honor implica

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una prueba muy difcil para la virtud del individuo: es engaosamente liberal, pero inmensamente restrictivo
desde el punto de vista espiritual y tico.
Y por eso, los Peces flotan por el intrincado laberinto de su existencia, y a menudo buscan patticamente
su propia identidad. Cuando tienen una vislumbre de su autntica imagen en el espejo de la vida, reaccionan
al principio con terror, y despus con incredulidad. Lo que ven es un ser divino, que a la humildad de Neptuno
le resulta difcil aceptar. De modo que lo niegan, se ocultan de l, y finalmente lo eluden, refugindose en la
profesin de actor o en la msica, y a menudo en la evasin de las drogas, el alcohol o la ilusin. Unos pocos
se estabilizan en algn tipo de ambicin mundana, en el entorno material, que es totalmente ajeno a la esencia
imaginativa de Neptuno, y por tanto sta no es, obviamente, su ruta hacia la felicidad. La mayora de los
Piscis, sin embargo (afortunadamente para el resto de nosotros), se refugian en actividades creativas. en los
servicios pblicos, la ciencia, la religin, la curacin, la enseanza... o en la consagracin personal plena a los
amigos, vecinos y parientes.
Si el Pez no se entiende a s mismo (o a s misma), los Gemelos de Gminis estn ms que dispuestos a
elucidar el misterio. Las personas regidas por Mercurio creen que pueden resolverlo todo, desmontndolo,
estudiando cmo funciona y armndolo de nuevo. Pero despus de practicar su fro anlisis crtico de Piscis, a
veces dejan las piezas esparcidas, y omiten volver a colocarlas tal como las encontraron. El Pez desmontado
por Gminis puede revolcarse impotentemente durante aos, mientras se esfuerza por recuperar su amor
propio. Gminis se siente estimulado a despejar la confusin perpetua que flota sobre Piscis, utilizando la
mente de Mercurio, filosa como una navaja, pero algunos Gemelos no pueden zambullirse a la profundidad
necesaria para superar aunque no sea ms que la barrera de algas marinas... como gallinetas humanas, que
picotean la nada, incapaces de ver el fondo del ocano o de calcular su profundidad.
El Piscis ms sagaz generalmente contemplar con indulgencia, si no con autntico afecto, las piruetas a
veces infantiles de los Gemelos. Si Gminis vive (como muchos Gemelos) en un reino encantado de
quimeras, Piscis tambin lo visitar all con mucho gusto. Pero Gminis suele analizar y rotular todos los
reinos msticos, incluso mientras retoza en ellos, y esto le estropea toda la diversin a Piscis. Un sueo es un
sueo... por qu acercarse demasiado, y escudriarlo con excesiva atencin? Piscis no soportar los sondeos
personales ni los interrogatorios tenaces del curioso Gminis. Si lo acosan con demasiada frecuencia, el Pez
se ir nadando a otro ro, u optar por el ardid ms fcil del engao, que puede oscilar entre la sutil evasin y
el embuste cabal... que Neptuno justifica como una simple defensa contra la intromisin en la intimidad
personal.
A veces el hombre o mujer Piscis se vengar inconscientemente de Gminis, que lo obliga a
reacomodarse sin cesar, y se negar a reaccionar vehementemente ante la exuberancia con que los Gemelos le
comunican un nuevo plan o idea maravilloso. Este puede ser el comienzo del fin, porque Gminis no puede
soportar por mucho tiempo que le salpiquen sus entusiasmos y raptos de inspiracin con el pesimismo de
Piscis, ni que se los enfren con los paos hmedos de Neptuno. Cuando quieren. los Peces pueden prestar una
ayuda reconfortante, con mucha fe y nimo alentador. Cuando no quieren, bueno... puede llegar el momento
en que el pjaro de Mercurio se encuentre en la rama, cantando solo.
Hay algunas cosas que estos dos pueden compartir dichosamente, algunos aspectos en los cuales tienen
una semejanza notable. Por ejemplo, en la valoracin de la belleza. Supongo que la mayora de nosotros no
prestamos suficiente atencin a la belleza, pero Gminis y Piscis tienen una clara conciencia del encanto
transitorio de la Naturaleza, de la rotacin de las estaciones, del amanecer y el crepsculo, y ambos son
generalmente propensos a baar sus almas en el arte, la poesa o la msica... en la palabra hablada o escrita.
Piscis absorbe la belleza estticamente, en silencio. Gminis sonre, con temor reverencial y emocionado
asombro. De alguna manera, la belleza hace converger al Pez y los Gemelos, forja un puente sobre el cual
ellos pueden arrojar un rayo de sol, y llegar quiz cada uno al otro lado de su pareja.
Tambin se parecen porque es difcil conseguir que cualquiera de los dos preste estrictamente atencin a
lo que se les dice, o mire de frente a su interlocutor durante algo ms que una fraccin de segundo. Los ojos
de Gminis son penetrantes, alertas, a veces burlones. Los de Piscis son tiernos, errantes, lquidos y estn
llenos de comprensin cuando se fijan en vosotros, cosa que no sucede a menudo. Los ojos de Gminis
tambin se fijan slo fugazmente, y despus saltan incansablemente de ac all, como los de un pjaro. La
mente de Gminis y Piscis tambin deambula, como sus ojos, aunque por razones distintas: para separar
galaxias.
La razn por la cual los Piscis son tablas de resonancia tan formidables para el resto de nosotros consiste
en que los Peces han pasado por todo, en un sentido krmico o espiritual. Han aprendido cmo aparselas sin
la atencin y la adulacin constantes. La fuerza de Neptuno, el arma de los Piscis contra los desencantos de la
vida, consiste en saber aparselas sin la una y la otra, y en no quejarse por esta carencia. Ello los hace ms

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fuertes de lo que parecen, mucho ms resistentes de lo que semejan ser. Los Peces estn acostumbrados a que
se desentiendan de ellos, an antes de haber nacido. Sin embargo, los Gminis estn habituados a que los
escuchen y les presten atencin desde que son prvulos bulliciosos. Lo cual nos trae a una de las principales
razones por las cuales estos dos signos solares se unen, cuando ello ocurre. Gminis debe comunicarse,
necesita expresarse, y el comprensivo Piscis casi siempre encuentra tiempo para escuchar con sincero inters
tanto las angustias como las emociones de los dems. Gminis no podra sobrevivir sin un auditorio que
valore la magia de las bellas retahlas de palabras de Mercurio. Y el Pez no podra sobrevivir sin sentirse
necesitado. Pero es posible que despus de un tiempo los Gemelos pierdan este inmenso don que le ofrece
Piscis, si los delicados anhelos de Neptuno tropiezan con una indiferencia constante. Habr seales. Indicios
claros. Y cuando aparezcan, habr que prestarles atencin. El mejor momento para enmendar un error se
presenta cuando ste es pequeo.

GMINIS:

Una revista acaba de aceptar el artculo que escrib! No te parece una gran noticia?
Ves qu rojizas estn las nubes all? Recuerdo que mi abuelo deca que cuando el cielo est rojo por la
noche, los marineros deben regocijarse, y que cuando est rojo por la maana, deben alarmarse...
GMINIS: Has odo lo que dije acerca de mi artculo para la revista?
PISCIS: Lo siento. Temo que no estaba escuchando.
PISCIS:

Mujer GMINIS Hombre PISCIS


Si cierras los ojos y tienes suerte, es posible que veas a veces un charco informe de bellos
colores claros, suspendido en la oscuridad.
Nunca ha habido un Pez que no se sintiera un poco inseguro acerca del lugar que ocupa en la estima de la
mujer Gminis que ama. sta le dar abundantes oportunidades para sentir celos, o los que pasan por serlo
entre los Piscis, aunque en verdad se trata de una variante bastante atenuada.
Pero a l no le servir de nada, porque la aparente veleidad de las Gemelas es incorregible. (Supongo que
ya sabis que toda chica Gminis contiene dos-mujeres-en-una. Empez a flirtear cuando estaba en la cuna o
cuando la empujaban en su cochecito: arrojaba besos a los desconocidos, sonrea a cualquiera que se fijase en
ella, conquistaba corazones con sus luminosos y titilantes ojos como estrellas.)
Esta mujer nunca crecer realmente. Parece una chiquilla traviesa, encantadora, que llora cuando la
regaan, que re alegremente cuando est satisfecha, que halaga y provoca y engatusa hasta que se sale con la
suya... y no es difcil que obtenga lo que desea de un Piscis. Este es esencialmente un hombre bondadoso,
afectuoso y tolerante, no demasiado exigente. Por supuesto, los Piscis pueden tener sus arranques de irritacin
y mal humor, y cuando abusan de ellos ms all de su lmite de resistencia, se convierten en autnticos
cascarrabias. Pero durante la mayor parte del tiempo, el Piscis est dispuesto a esmerarse por satisfacer las
necesidades de ella. Es posible que se desconcierte cuando sus necesidades cambien a cada rato, junto con sus
deseos y ensueos, pero igualmente seguir esmerndose. En verdad, l tampoco es un modelo de estabilidad.
Ninguno de los dos recibi una dosis generosa de esta cualidad en la cuna. El Pez se impacienta rpidamente
despus de lidiar durante mucho tiempo con las algas de los obstculos y demoras, y en cuanto a ella... bueno,
las mujeres Gminis slo tienen una pizca de paciencia, o ni siquiera eso. Es innecesario aclarar que ste se
convertir en uno de los elementos que alterarn frecuentemente la placidez de su relacin, tpica de la
configuracin de signos solares 4-10. La paciencia es el principal ingrediente necesario en cualquier receta
para lograr la felicidad y la armona.
Es posible que los ojos de un hombre Piscis parezcan extraviados. Los ojos de Gminis parecen buscar
algo prximo a ser hallado. Cuando se trata de Piscis, Acuario, Escorpin y Gminis los cuatro signos
solares los ojos reflejan la pauta de la personalidad y el cuo del alma.
La mente de ella es como una casa de cristal desde cuyo interior contempla vida, con un panorama
tridimensional en cualquier direccin hacia la que se puedan encauzar sus anhelos. Estas mltiples
alternativas generan muchas manifestaciones en la personalidad exterior, pero sobre todo... versatilidad. Los

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estados de nimo de la Gminis regida por Mercurio no se parecen a los ocanos ms profundos de los
estados de nimo de Piscis, regidos por Neptuno. Aqullos son veloces como el rayo, mercuriales, y afloran
en ella imprevisiblemente, como un cambio de la direccin del viento.
La mente del Pez tambin parece una casa con muchas ventanas, pero sin cristales, ni persianas ni visillos
para protegerlo de las estaciones... o de los caprichos de ella. El hombre Piscis es vulnerable y sensible, no
slo al trato que recibe de los dems, sino a los sentimientos y emociones de quienes lo rodean, cuyos
problemas y sntomas asimila en su mente y su cuerpo. Ya veis entonces que en algunas oportunidades la
relacin con la chica Gminis, cambiante y frecuentemente alterada, que a veces proyecta dos emociones al
mismo tiempo, puede ser bastante desquiciante para el hombre regido por Neptuno.
Esta mujer naci chisporroteando energa mental y fsica como si se tratara de ondas ssmicas. Piscis
naci cansado. No es raro que el Pez est un poco cansado, en lo espiritual, si se toma en cuenta todo lo que
ha visto durante sus muchas encarnaciones: todo el poder y la gloria, lo feo y lo bello, lo atrozmente
innombrable... y lo estticamente indescriptible. Es agotador. Sobre todo cuando sientes la tentacin, mientras
sueas despierto, de compararlo con la actual existencia vulgar y mundana. Esto, por lo menos, lo entender
su mujer Gminis. La necesidad que l experimenta de ver el mundo a travs de un cristal de color suave hace
vibrar una cuerda consonante en el corazn de ella. A ella tambin le gustara que las cosas fueran distintas,
ms hermosas. Pero su naturaleza mercurial no rehye analizar fra y claramente las cosas tal como son, mientras piensa en sueos cmo le gustara que sean, en tanto que Piscis nunca quiere admitir la horrible verdad
de nada. La forma en que ella desgarra constantemente el caamazo de la vida para verificar cmo se lo
podra recomponer en condiciones ms aceptables, lo alarma. Cuando ella inicia este proceso analtico con el
amor, o sea con algo que segn las arraigadas convicciones de Piscis es imposible analizar, porque existe el
riesgo de lesionar su delicada estructura, hay seales de que empieza el conflicto, ac, all o acull. Las
parejas Gminis-Piscis suelen cambiar de residencia ms a menudo que cualquier otra combinacin de signos
solares (exceptuando Gminis-Sagitario, el doble Gminis o el doble Sagitario). En realidad, ste es un factor
francamente positivo, porque la excitacin de la mudanza no deja mucho tiempo para las reyertas menudas.
Como todas las configuraciones de signos solares 4-10, Gminis y Piscis deben lidiar con la vibracin de
tensin. Sus naturalezas son totalmente distintas, sus motivaciones les resultan mutuamente inexplicables
durante la mayor parte del tiempo. Las situaciones dolorosas asociadas con sus familiares, con los padres de
uno u otro, o con sus carreras individuales, pueden servir de marco a los estallidos de desavenencia. Con un
intercambio armonioso del Sol y la Luna en sus natividades !o con Lunas en conjuncin) unos hilos de
comprensin los acercarn an ms. Sin estos primeros auxilios planetarios, ambos sufrirn mltiples heridas,
que podrn tardar mucho en cicatrizar.
Si l se queda charlando demasiado tiempo con un vecino, ella es capaz de dejarlo fuera de casa durante
toda la noche. Entonces es posible que l masculle: Y qu falta me hace?, y que se vaya a ahogar sus
penas en la taberna de la esquina, en razn de lo cual ella vuelve a dejarlo fuera de casa, en razn de lo cual l
vuelve a refugiarse en la botella, en razn de lo cual ella... y as sucesivamente. Lo nico que el hombre Piscis
no puede soportar durante mucho tiempo es una andanada de crticas, sarcasmos y acusaciones, y la gemela
negativa de su mujer Gminis es una especialista en el arte de la invectiva satrica. Sus colricos torrentes de
palabras y su habilidad para emplear los matices sutiles pueden llover sobre el alma sensible del Pez como
una cruel granizada. Por otra parte, si hay algo que la mujer Gminis no puede soportar, esto es el silencio, o
el hecho de que la dejen sin auditorio, y si hay algo en lo que el Piscis sobresale es en su aptitud para evadirse
de las escenas desagradables. A veces jurarais que estos hijos de Neptuno han dominado literalmente el arte
de esfumarse. Puf! Han desaparecido! As, sin ms. Entonces ella se queda sola. Bueno, no totalmente sola.
Siempre puede aliarse en la brega con su otra mitad, su Gemela omnipresente, que seguramente comprende su
necesidad de expresar sus tormentos mejor de lo que la comprende el Pez, el cual no alcanza a ver, aunque en
ello le vaya la vida, por qu alguien habra de querer derrochar tanto tiempo en intiles competiciones
verbales. Piscis tiende instintivamente a sortear los problemas al tacto. Gminis prefiere disiparlos con
palabras. Aunque es posible que se amen sinceramente, a veces estos dos parecen perfectos desconocidos que
intentan comunicarse con palabras y seas, embrollados como un juego de anagramas al que le faltara la
mitad de las letras. Gminis habla... y Piscis no siempre escucha. Piscis llora... y Gminis no siempre lo
compadece. Sin embargo, ambos necesitan desesperadamente que los acepten y los entiendan, porque
ninguno de ellos se entiende a s mismo. Estn implicados en una bsqueda recproca de identidad, nacidos
ambos bajo la influencia de la dualidad, como si fueran cuatro personas alojadas bajo un solo techo: dos
visiblemente, y las otras dos encerradas dentro, procurando escapar y darse a conocer.
Su acomodamiento sexual no estar desprovisto de esfuerzos, aunque, si tienen un aspecto Sol-Luna
positivo u otros intercambios planetarios favorables en sus horscopos. es probable que l pueda satisfacer la

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necesidad que ella experimenta de que no la sofoquen ni la subyuguen demasiado, y es probable que ella
pueda suministrarle las variadas muestras de afecto que l necesita para no aburrirse. Ni a Gminis ni a Piscis
les hace falta una pasin fogosa para que el acto amoroso les proporcione la satisfaccin de la autntica
intimidad, y ambos son capaces de adaptarse inmediatamente a los caprichos y deseos efmeros del otro. Sin
embargo, es posible que a su unin le falte una fusin fsica realmente profunda. Acaso ello se debe a que el
amor nunca basta por s solo para satisfacer los anhelos innominados de Piscis o Gminis? O se debe a que
rara vez los signos de Aire y Agua experimentan, como los de Tierra y Fuego, una necesidad arrolladora de
consumar sexualmente su afinidad mental y emocional primigenia?
Cualesquiera que sean las razones, a estos dos nunca les resulta fcil convertirse en una sola carne o
conocerse sexualmente, en el sentido bblico. Quiz la unidad hombre-mujer no se pueda lograr sin
desprendimiento, cualidad sta que es tan indispensable en la sexualidad como en otros aspectos del amor y la
amistad. Si bien Piscis casi siempre lo comprende cabalmente, a veces no ocurre lo mismo con la mujer
Gminis ms infantil. Es probable que sus momentos de intimidad sean dictados por los deseos impulsivos de
ella, en lugar de responder a los instintos de ambos. Si ella permite que l le ensee con el ejemplo el
significado de la entrega desinteresada tanto en lo fsico como en lo mental y emocional su contigidad
fsica se convertir en una renovacin reiterada de su amor, seguida por una comunin ms profunda que la
anterior, en razn de un intercambio de sus naturalezas interiores, que lo har a l ms espontneo, como
ella... y la har a ella ms sosegada, como l.
Como he dicho, se parecen por algunas de sus actitudes. Ambos prefieren que sus nmeros de telfono no
figuren en la gua, y valoran la intimidad y la libertad. Ambos disfrutan generalmente de la poesa, la msica,
el arte o la danza. Y ambos aborrecen vehementemente la rutina. El aburrimiento es su enemigo comn. Sin
embargo, no es tan afortunado que ambos sean proclives a abusar de la verdad, partiendo desde las pequeas
mentiras inocentes hasta llegar al engao premeditado, justificado con una mirada de excusas.
Frecuentemente, cuando Gminis acusa a Piscis de distorsionar la verdad (o viceversa), el muerto se re del
degollado. A la mujer Gminis le resulta imposible comprender la vida y el amor slo con los sentidos. Su
regente, Mercurio, le exige que emplee el intelecto para resolver el enigma. Quiz podra elucidarlo todo si
alguien escuchara real y autnticamente sus dudas y angustias, sus xtasis e ideas. El hombre Piscis puede
prestarle este servicio si lo desea: escucharla paciente y comprensivamente, esperando que ella complete sus
tortuosos circuitos lgicos hasta encontrar finalmente la vuelta justa del camino que conduce a la dicha.
Despus de un tiempo, ella le coger la mano mientras marchan juntos, y los ojos de l ya no tendrn esa
expresin tan extraviada. Cmo podra estar extraviado un hombre cuando lleva consigo no a una, sino a dos
encantadoras y deliciosas acompaantes de sexo femenino? El hecho de estar enamorado de unas Gemelas
puede ser a veces turbador y desconcertante, pero nadie ha dicho nunca que sea montono.
Para el hombre Piscis, el amor no es ms que otro sueo, en el cual l, el soador, controla jubilosamente
el mundo que ha creado en su imaginacin mediante percepciones sensoriales intuitivas... colorendolo con
tonos pasteles, frgiles y cambiables. A menudo, las insatisfacciones que expresa constantemente su dama
Gminis abren grandes desgarrones en su sueo, y l intenta emparcharlo, volver a dejarlo como nuevo. Pero
los sueos no se remiendan fcilmente, una vez rasgados. Estn hechos de un material muy etreo.
Si ella habla con dulzura, si se mueve delicada, lentamente, es posible que consiga entrar con l en su
mundo de ensueo, y que vea el amor como lo ve l: como un elemento de sosiego y belleza. Bastar que ella
se ponga de cuando en cuando, como buena Gminis, en el lugar de l, y as terminar por llegar rectamente
al corazn del Pez, justo el cobijo que ella ha buscado durante tanto tiempo y que ya crea que no podra
hallar jams: ese jardn mgico donde las rosas crecen sin necesidad de espinas protectoras

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Hombre GMINIS Mujer PISCIS


En su ausencia, las cosas estn excepcionalmente tranquilas en la isla. Las hadas se toman
una hora ms por la maana, las bestias cuidan a sus cras... pero con la llegada de Peter, que
aborrece el letargo, se ponen nuevamente en movimiento...

La chica Piscis tpica har prcticamente cualquier cosa para salvaguardar la tranquilidad y el sosiego de
su relacin amorosa o su matrimonio. Se adaptar ella, y adaptar su rutina y sus hbitos, a la comodidad del
hombre Gminis que ama, aunque se escandalicen sus amigas partidarias de la liberacin femenina. stas la
compadecern sin disimulo, pero ella se limitar a sonrer y no les har caso.
La chica Pez no es realmente una esclava masoquista de los caprichos de los Gemelos. Esto es slo lo que
piensan sus amigas compasivas. No son las nicas. Su hombre Gminis tiene la misma impresin. Y sta es
precisamente la impresin que desea darle (y que desea dar a todos sus amigos, vecinos y familiares
entremetidos) esta mujer dulce, complaciente, afable. Ella sabe lo que hace. Hace ms fcil su propia
existencia. Una vez que se ha enamorado de un hombre Gminis, la mujer de Neptuno tiene el sentido comn
suficiente para comprender que slo le quedan dos alternativas prcticas en esta desafiante relacin influida
por una configuracin de signos solares 4-10. Puede decidir que el amor no vale las exigencias que el hombre
Gminis impone a su delicado espritu... y lo deja. Sencillamente se va una maana mientras l est ausente.
O puede decidir que el placer y la dicha, la satisfaccin y el sosiego de amarlo, y de recibir a cambio el amor
y la devocin de por lo menos una de sus personalidades gemelas, justifican la introduccin de unos pocos
ajustes en su relacin, de trecho en trecho. Si opta por esta segunda alternativa, sencillamente la sacar
adelante. Tal vez deba urdir algunos planes intrincados, pero lo lograr.
La resistencia pasiva es su secreto de Neptuno. La mujer Pez naci con un prodigioso talento para ello,
as como algunas personas nacen con odo para la msica o con una destreza magistral para arrojar la pelota.
Ella sabe cul es el momento justo para replegarse, hasta dnde debe retroceder, cul es precisamente la hora
propicia para avanzar y hasta dnde puede llegar con l. En verdad, no lo sabe realmente. Lo intuye. Es como
si hubiera nacido equipada con una especie de antena invisible pero sumamente sensible que le enva seales
premonitorias y perceptivas respecto de las pautas de comportamiento humanos.
Es innegable que todos los Gminis tienen una inmensa agilidad mental, que estn siempre alertas y
vigilantes, y que por tanto es casi imposible engaarlos. Pero aunque el hombre Gminis sea
indiscutiblemente sagaz, puede ser ciego a las estrategias de la chica Piscis, propias de Neptuno. Si ella desea
hacer algo que l podra desaprobar, no derrochar sus energas en pedidos insistentes o ruegos lacrimosos
que podran sacudir su relacin. Sencillamente har lo que l desea cuando l est presente... y lo que desea
ella cuando l no est. Aquello que desea hacer sin la bendicin de l no ha de ser necesariamente algo
siniestro o taimado. No ha de planear necesariamente el robo de un banco o una infidelidad.
Podra ser algo tan inocente y vulgar como dormir una hora ms. Al igual que todos los pjaros, el
Gminis tpico est casi siempre levantado y alerta desde muy temprano, silbando alegremente o quejndose
con mal talante (segn cul fue el Gemelo de Gminis que se levant primero), y puede adoptar una actitud
muy crtica respecto de aquellos que se quedan en cama hasta ms tarde de lo que Gminis considera justo
cuando hay algo que hacer. Podra tratarse de que ella desea leer algo que no es precisamente lo que l le
recomendara. Quiz se trata de visitar amigos cuando l cree que debera emplear su tiempo en algo ms
productivo. Tal vez se trata de ir al saln de belleza donde ha pedido hora. Por qu habra de enfurruarlo
esto? Porque l piensa que ya es suficientemente bella tal como est, y adems, el dinero que gasta en su
embellecimiento personal estara mejor invertido si los dos viajaran juntos. Para Gminis, el ms sublime de
los xtasis consiste en cambiar de escena, en ir a alguna parte, a cualquier parte que sea distinta y que
implique un alejamiento de la rutina cotidiana.
La sagacidad de Gminis incluye un instinto prctico infalible. Por ejemplo, si ella pidiera hora en el
saln de belleza delante de l intentara disuadirla, ya fuera con sus considerables poderes de persuasin y su
simpata, o con crticas malhumoradas. Pero una vez que haya ido y que l haya visto el resultado, casi nunca
entablar una discusin. En primer trmino, ella est encantadora y l no tiene corazn par reir con una
persona tan atractiva. En segundo trmino, sabe que tratar de impedir lo que ya est hecho implica una
prdida intil de tiempo. Este hombre casi nunca pierde el tiempo. Tiene la conviccin de que el tiempo ha
sido hecho para colmarlo con actividades: se debe aprovechar cada segundo del que est compuesto (excepto

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para dormir, lujo este que los pjaros medios de Mercurio slo se dan durante perodos muy breves). El
tiempo es la sustancia de que est hecha la vida... y los sueos. Dilapidarlo sin hacer nada es, a su juicio, un
pecado.
La mujer Piscis tiene un enfoque totalmente distinto del tiempo. Piensa que es inagotable: que si se le
escapa un poco hoy, maana habr ms. Y piensa que una de las formas ms estupendas de pasarlo es sin
hacer nada. Sobre todo despus de que ella ha agofdo sus energas realizando mil y un favores a los dems, y
cuando su espritu normalmente jovial est abatido. Piensa que cuando es posible, la mejor forma de pasar el
tiempo consiste en limitarse a ser ella misma, a existir, simplemente... en las fras y verdes aguas de sosegada
contemplacin, propias de Piscis. Esto le refresca el alma.
Su alma necesita refrescarse mucho, despus de vivir con un hombre Gminis baja la vibracin 4-10,
siempre un poco tensa. Es posible que las mismas cualidades que al principio la hicieron gravitar hacia l,
resulten despus desmedidamente desgastadoras y fatigosas para su naturaleza ms plcida. La mente de l es
rica en pequeas sorpresas, y esto la regocija. l tiene una gran rapidez y agilidad mental, y capta
instantneamente todo lo que ve, oye o lee. Sus ideas afloran cuando menos se espera, y son casi siempre
originales y fascinantes. l parece estar siempre atareado: soando, pensando, planeando o haciendo, mientras
ella est atareada en el solo hecho de ser. El puede cambiar de ocupacin o carrera en un abrir y cerrar de sus
ojos centelleantes, y ella nunca sabe con qu se encontrar a la vuelta de la esquina. Esto es emocionante. Es
seductor y estimulante. Parece un misterio que ella nunca puede sondear ntegramente, y adora los misterios.
Pero es posible que despus de un tiempo estos mismos rasgos de su hombre azuzado por Mercurio le hagan
aorar la soledad y la paz... la seguridad de lo inmutable... un repliegue en el reconfortante sosiego de sus
propios sueos y objetivos ms lnguidos y apacibles.
Durante un tiempo, el maravilloso ingenio de l, su conmovedora sonrisa triangular de chiquillo, el fulgor
estelar de sus ojos expresivos, su inteligencia cabal y sus mltiples talentos harn que la chica Pez viva
hipnotizada por su hechizo mercurial. Presenciar los cambios de su estado de nimo, que es tan pronto
afectuoso, alegre, clidamente tierno y generoso, como irritable, sarcstico, hosco y mezquino, para volver
luego a su estado anterior (merced al predominio del Gemelo bueno), es como contemplar un calidoscopio
viviente. Cuando ella asiste a sus acrobacias mentales desde lejos, le parecen interesantes, incluso
electrizantes, y por cierto estimulantes. El desgaste y el deterioro de su tranquilidad slo empiezan a notarse
cuando ella accede gradualmente a convertirse en una parte integral e inseparable de los altibajos
multifacticos de su imprevisible actividad mental, fsica y emocional.
Por mucho que intente resistirse, la mujer de Neptuno no puede evitar que al fin la succione el remolino
ms prximo de experiencia humana. Ella absorbe los sentimientos y emociones que la rodean como si fuera
una esponja parapsicolgica o una placa fotogrfica sensible (ms o menos como lo hacen los Cncer y los
Escorpin). Y como su propia aura est sintonizada con una vibracin ms apacible, a veces la percusin de
los cmbalos de Gminis y las notas agudas de las flautas pueden alterar sus nervios y turbar su aplomo,
dejndola vagamente deprimida. La solucin consiste, para ella, en alejarse nadando quedamente de los
desbordes de sensaciones circundantes que amenazan ahogada... internarse en el mundo silencioso de su
serenidad interior... a cualquier precio... y volver con sus fuerzas renovadas. Durante estos necesarios
perodos de repliegue, el hombre Gminis que la ama se sentir desconcertado y ofendido, y a veces
encolerizado.
A l nunca se le ocurre pensar que tambin es un especialista en la tctica defensiva del retraimiento
mental, que es un experto en el arte de refugiarse en un distanciamiento hurao cuando ella ms necesita que
sea atento y considerado. Recordad que Piscis es un alma muy vieja, que naci sabia, y que Gminis es el
nio simblico (vanse Los doce misterios del amor, en el comienzo de este libro). No puede evitar el
hecho de ser un poco egocntrico. Sin embargo, a menudo su perspicacia es sorprendente, a pesar del carisma
de nio simblico. Habr momentos en que manifestar una asombrosa comprensin de lo que ella est
soportando, y entonces le demostrar que la entiende con su delicado toque geminiano de compasin...
exquisitamente tierno. O intuir que lo ms apropiado es hacerla rer, sugerirle un viaje... o slo un paseo en
coche o una caminata, juntos. Estos sern los momentos singulares y gorjeantes de su amor.
A menudo, la qumica sexual que existe entre este hombre y esta mujer es la alquimia silenciosa que los
aproxima en todos los sentidos, y no slo fsicamente. De alguna manera, merced a la fusin de sus elementos
de Aire y Agua durante las intimidades de su unin sexual, l se hace ms parecido a ella... y ella ms
parecida a l. De modo que, extraamente, despus de hacer el amor, ella est ms vivaz, vibrante y alerta... y
l est ms apagado y afable, menos inquieto e inquisitivo.
Cuando el Agua se asocia con el Aire en una unidad sexual (vase la seccin La combinacin de los
elementos, al final de este libro), el Agua transforma mgicamente el Aire en su propio elemento, en forma

142

de una lluvia vivificante, refrescante, despus de lo cual toda la Naturaleza vuelve a estar lozana, impregnada
de promesas y aromatizada por nuevas esperanzas. El Pez y los Gemelos encuentran a menudo, encerrada en
el crculo de sus respectivos brazos, la esquiva armona que buscan juntos en otros momentos, y que nunca
parecen poder capturar totalmente. El misterio sexual que flota entre ambos puede ser una poderosa
experiencia regeneradora para los dos, la base secreta y slida sobre la que descansar el deseo permanente de
tratar de entender sus respectivas personalidades, inmensamente distintas.
La morosidad de ella, su tendencia a eludir los problemas, lo fastidia y lo frustra. Pero ella tambin
cambia de tema con extraordinaria facilidad. No obstante su gran rapidez, a l le resulta difcil seguirle el
ritmo. Las crticas ocasionales y los intereses dispersos de l. la preocupan y la ofuscan. Sin embargo, casi
siempre se las ingenia para evitar las situaciones desagradables. l preferira que no fuera as, porque necesita
el peridico estmulo mental de la controversia y la discusin para mantener aguzado su ingenio de Mercurio.
Ella preferira que l se relajase ms y se inquietara menos. l preferira que ella se relajara menos y se
inquietara ms. Bueno, quiz no que se inquiete, pero s por lo menos que vea las cosas tal como son y no
como le gustara que sean (aunque l tambin sucumbe a la tentacin de soar despierto). El hombre Gminis
est configurado como un mosaico lleno de torsiones y giros sbitos. Precisamente cuando creis que es hostil
a los temas metafsicos, comprar un libro sobre la Gran Pirmide. Conoc a un pjaro de Mercurio que
despus de afirmar que despreciaba el ocultismo, pidi que le regalaran una bola de cristal para Navidad.
Quera experimentar. La experimentacin es la adrenalina que Gminis necesita para mantenerse en
movimiento. Si algo despierta su inters, no descansar hasta haber elucidado el concepto y haberlo
perfeccionado.
Las complejidades de la mente y las actitudes de este hombre nunca terminarn de magnetizar y
desorientar a la mujer Piscis. A veces sus contradicciones harn que lo admire ms, e incluso la incitarn a
esforzarse por emular su enfoque analtico e intelectual pero circunstancialmente imaginativo. En otros
momentos, desesperar de llegar a conocerlo verdaderamente alguna vez. Por razones distintas, l tambin se
preguntar si alguna vez lograr conocerla realmente. Puesto que tanto l como ella tienen dos componentes,
el juego no termina nunca. Tanto Gminis como Piscis son signos duales. Alguna que otra vez, cuando la
mujer Pez est mental, fsica y espiritualmente exhausta, se torna fra como el hielo y se niega a comunicarse.
lo cual lo aflige mucho ms de lo que le demuestra a ella. Pero ella casi siempre evita una escena al hacer caso
omiso de sus propios sentimientos heridos. Cuando la calamidad, la confusin o la confrontacin asoman en
el horizonte, la soadora Piscis se limita a simular que no estn all, y para ella, entonces, desaparecen. Ha
aprendido que si aguardas pacientemente, la mayora de los problemas se resuelven por s solos. Pero a l le
resulta imposible enfrentar un problema fingiendo que no existe. Se siente obligado a analizarlo y elucidarlo
inmediatamente. No puede resistir esta compulsin, as como no puede resistirse a resolver un crucigrama o a
contestar el cuestionario en voz alta cuando mira un programa de preguntas y respuestas por televisin (y l
siempre acierta antes que la persona sometida al interrogatorio). Todo hombre Gminis es un pedagogo de
alma, impulsado a purificar las aguas cenagosas con la claridad de la razn y la lgica. A esto se suma,
adems, la contradiccin de su tendencia a soar despierto.
Como Gminis y Piscis pertenecen a los elementos de Agua y Aire, nunca sern un demostrativos,
clidos y afectuosos, exteriormente, como las personas nacidas bajo el elemento de Fuego. Sin embargo,
gracias a su esencia combinada de agua y aire, pueden ofrecerse recprocamente un don extraordinario: la
libertad. Ella rara vez cuestionar los impulsos o el paradero de l, porque no es posesiva. l tambin le
conceder la misma libertad de movimientos. A l no le interesar saber por dnde anda flotando ella mientras l est ausente, pero cuando est presente, pretender que le haga compaa, porque Gminis necesita
pblico. Ella es una maravillosa escucha, y sta es la cualidad que ms lo enternece. Personalmente, Gminis
sabe que esta dama parsimoniosa, rica en secretos y sutilezas apacibles, se interesa sinceramente por todo lo
que l tiene que decir, y sobre todo, sta es su necesidad ms recndita.
La mujer Pez sabe que este hombre verstil, de mltiples estados de nimo, la necesitar siempre, y sta
es, sobre todo, la necesidad ms recndita de ella: que la necesiten. Cuando l es sarcstico, como Gminis
puede serlo a veces, le destroza el corazn. Pero cuando recupera su simpata, cuando sus ojos titilan
nuevamente con una pltora de sorpresas, cuando proyecta su caprichosa sonrisa triangular y sus anhelos de
Peter Pan, ella sabe que ha acertado al adaptar su forma de vida predilecta a la de l. Al proceder as, rio ha
perdido nada, en realidad, y ha ganado su propio calidoscopio humano, que cambia de color, de forma y de
diseo al ms ligero toque.
l la regaar reiteradamente por ser tan generosa y derrochadora. Hasta que un da l volar por toda la
ciudad, sin aviso previo, como si realmente tuviera las alas plateadas de Mercurio adosadas a los talones;
pidiendo a dos o tres bancos que le presten el dinero que no tiene, para ayudar a un amigo en aprietos.

143

Durante meses l har serios planes para inscribirse en la escuela nocturna y obtener su ttulo de ingeniero, y
sbitamente se comprar una mquina de escribir y anunciar que ser novelista. Volver a casa, extenuado
despus de hacer flexiones mentales durante todo el da, rechazar la cena, le informar a ella que se va a la
cama, y se encaminar rezongando hacia el dormitorio. Antes de cinco minutos reaparecer, le har un guio
con la vieja magia, y le preguntar si quiere salir a presenciar la puesta de sol, para despus cenar fuera e ir al
teatro.
Mientras ella se est cambiando l la regaar para que se d prisa, y se quejar, irritado, de que tarda una
eternidad en arreglarse para salir. Pero cuando est sentada junto a l, en el auto, le dir inesperadamente que
nunca la vio tan hermosa. te das cuenta que no sabra qu hacer sin ti?, le pregunta l. Ella no contesta, y se
limita a sonrer. Siempre lo ha sabido. Por eso todava est all.

144

Tipos de personalidad
SIGNOS CARDINALES

(lderes)

SIGNOS FIJOS
(organizadores)

Aries
Cncer
Libra
Capricornio

Tauro
Leo
Escorpin
Acuario

SIGNOS MUTABLES
(comunicadores)

Gminis
Virgo
Sagitario
Piscis

SIGNOS POSITIVOS (MASCULINOS)


(agresivos, idealistas dinmicos)
Aries
Gminis
Leo

SIGNOS NEGATIVOS (FEMENINOS)


(reservados, estrategas reflexivos)
Tauro
Cncer
Virgo

Libra
Sagitario
Acuario
SIGNOS DE FUEGO
(inspirativos)

Aries - Fuego cardinal


Leo - Fuego fijo
Sagitario - Fuego mutable

Escorpin
Capricornio
Piscis
SIGNOS DE AIRE
(mentales)

Libra Aire cardinal


Acuario - Aire fijo
Gminis - Aire mutable
-

SIGNOS DE TIERRA

SIGNOS DE AGUA

Capricornio - Tierra cardinal


Tauro - Tierra fijo
Virgo - Tierra mutable

Cncer Agua cardinal


Escorpin - Agua fijo
Piscis - Agua mutable

(materiales)

(sensibles)
-

145

ARIES:

Fuego-Positivo-Masculino-Cardinal
Lder inspirativo, agresivo, dinmico, idealista

LEO:

Fuego-Positivo-Masculino-Fijo
Organizador inspirativo, agresivo, dinmico, idealista

SAGITARIO:

Fuego-Positivo-Masculino-Mutable
Comunicador inspirativo, agresivo, dinmico, idealista

CAPRICORNIO: Tierra-Negativo-Femenino-Cardinal Lder reservado


Lder reservado, reflexivo, estratega

TAURO:

Tierra-Negativo-Femenino-Fijo
Organizador reservado, reflexivo, estratega VIRGO:

LIBRA:

Aire-Positivo-Masculino-Cardinal
Lder mental, agresivo, dinmico, idealista

ACUARIO:

Aire-Positivo-Masculino-Fijo
Organizador mental, agresivo, dinmico. idealista

GMINIS:

Aire-Positivo-Masculino-Mutable
Comunicador mental, agresivo, dinmico. idealista

CNCER:

Agua-Negativo-Femenino-Cardinal
Lder sensible, reservado. reflexivo, estratega

ESCORPIN:

Agua-Negativo-Femenino-Fijo
Organizador sensible, reservado, reflexivo, estratega

PISCIS:

Agua-Negativo-Femenino-Mutable
Comunicador sensible, reservado, reflexivo, estratega

La misin krmica de los doce signos solares


ARIES:
LIBRA:
CAPRICORNIO:
CNCER:
LEO:
ACUARIO:
TAURO:
ESCORPIN:
SAGITARIO:
GMINIS:
VIRGO:
PISCIS:

DIRIGIR de una manera inspirativa, agresiva, dinmica e idealista


DIRIGIR de una manera mental, agresiva, dinmica e idealista
DIRIGIR de una manera material, reservada, reflexiva y estratgica
DIRIGIR de una manera sensible, reservada, reflexiva y estratgica
ORGANIZAR de una manera inspirativa, agresiva, dinmica e idealista
ORGANIZAR de una manera mental, agresiva, dinmica e idealista
ORGANIZAR de una manera material, reservada, reflexiva y estratgica
ORGANIZAR de una manera sensible, reservada, reflexiva y estratgic a
COMUNICAR de una manera inspirativa, agresiva, dinmica e idealista
COMUNICAR de una manera mental, agresiva, dinmica e idealista
COMUNICAR de una manera material, reservada, reflexiva y estratgica
COMUNICAR de una manera sensible, reflexiva y estratgica

146

Y as, la santa misin encomendada a cada hombre y mujer consiste en personificar el sacrosanto atributo
natal de su signo solar individual.
ste es el mensaje de sabidura y amor de nuestros Co-Creadores, canalizado a travs de Sus mensajeros e
intrpretes, las estrellas, los planetas y las luminarias, a travs de todo lo solar, todo lo lunar y todo lo estelar,
hacia todos los hombres y mujeres de todo el mundo.
Slo si cada cual es fiel a la santa misin de su propio signo solar, ser posible crear la unidad y la
armona a partir del caos y la confusin, y favorecer el advenimiento del da en que Su Voluntad se har
sobre la Tierra, como en el Cielo.
Dentro del bello sincronismo del equilibrio astrolgico, nuestros Co-Creadores dispusieron que los cuatro
signos cardinales (lderes) estuvieran compuestos por partes iguales de la esencia positiva-masculina y
negativa-femenina, y tambin por partes iguales de los cuatro elementos de Fuego. Tierra. Aire y Agua.
El mismo equilibrio y la misma armona perfectos existen dentro de las filas de los cuatro organizadores
fijos y los cuatro comunicadores mutables.
Cada parte del todo es diferente, como consecuencia de lo cual todas son iguales, y ste es el Gran Enigma
Csmico de la Sabidura y la Verdad. El primer paso encaminado a resolverlo y es slo el primer paso,
porque hay muchos ms consiste en que la Imperfeccin iguala a la Perfeccin. El primer paso encaminado
a lograr el esclarecimiento est detallado en Los doce misterios del amor, en el comienzo de este libro.

147

La combinacin de los elementos


SIGNOS DE FUEGO
Aries
Leo
Sagitario

El Fuego se combina fcilmente con el Fuego y


el Aire pero necesita tolerancia para combinarse
con la Tierra y el Agua.

SIGNOS DE AIRE
Libra
Acuario
Gminis

El Aire se combina fcilmente con el Aire y


el Fuego pero necesita tolerancia para combinarse
con la Tierra y el Agua.

SIGNOS DE TIERRA
Capricornio
Tauro
Virgo

La Tierra se combina fcilmente con la Tierra y


el Agua pero necesita tolerancia para combinarse
con el Fuego y el Aire.

SIGNOS DE AGUA
Cncer
Escorpin
Piscis

El Agua se combina fcilmente con el Agua y


la Tierra pero necesita tolerancia para combinarse
con el Fuego y el Aire.

FUEGO Y FUEGO
Cuando el Fuego se encuentra con el Fuego, las llamas ms altas y calurosas que se forman pueden producir
una conflagracin, que se consumir, y se apagar... o que iluminar las tinieblas, y derretir el hielo y el
miedo de las ideas negativas. La opcin depende de ambos individuos por igual.
AIRE Y AIRE
Cuando el Aire se encuentra con el Aire, la libertad de movimiento es total, y existen pocas restricciones o
ninguna. Esta combinacin puede desembocar en una gloriosa elevacin mental, emocional y espiritual. Pero
sin los vientos del cambio el Aire se vuelve rancio y se contamina, y en determinadas condiciones el Aire
puede agitarse y trocarse en un tornado frentico. La opcin tambin depende de ambos individuos.

148

TIERRA Y TIERRA
Cuando la .fierra se encuentra con la Tierra, esta combinacin puede transformarse en una colosal montaa de
fe y vigor... o puede convertirse en cambio en un desierto rido, segn la direccin que tome. Cuando se agita,
el resultado puede ser un terremoto, con repercusiones volcnicas. La opcin tambin depende de ambos
individuos.
AGUA Y AGUA
Cuando el Agua se encuentra con el Agua no hay resistencia, y surge un ro continuo de inspiracin, que fluye
finalmente hacia un ocano mayor de esclarecimiento... o. en condiciones negativas, puede gotear dentro de
una caleta estancada, sin salida. El agua sacia la sed, pero cuando se descontrola produce inundaciones
destructivas. La opcin tambin depende de ambos individuos.
FUEGO Y AIRE
El Aire aviva el Fuego, y lo hace arder con ms brillo, estimulando el entusiasmo y la emocin... o
provocando la pasin y la clera. El exceso de Fuego puede consumir el oxgeno del Aire, dificultando la
respiracin... y el exceso de Aire, por ejemplo en el caso de un vendaval, puede debilitar la llama. La opcin
tambin depende de ambos individuos.
FUEGO Y TIERRA
Siempre resulta obvio cul de los dos elementos es el ms fuerte y perdurable. La Tierra permanece donde
est, a menos que la mueva una explosin interior, o la accin de fuerzas exteriores. El Fuego traza su propio
rumbo, elevndose siempre hacia los cielos. El Fuego puede chamuscar la Tierra, pero nunca puede destruirla
por completo. La Tierra sustenta al Fuego, formando una base estable para sus llamas. Pero un exceso de
Tierra puede sepultar al Fuego ms refulgente. La opcin tambin depende de ambos individuos.
FUEGO Y AGUA
Un Fuego de gran magnitud puede deshidratar o secar una pequea cantidad de Agua, con su calor excesivo.
Por otro lado, grandes cantidades de Agua pueden apagar el Fuego, extinguiendo sus llamas. Por tanto, el
Fuego teme o respeta instintivamente al Agua, y viceversa. Pero ambos intuyen inconscientemente el
peligro... de que cada uno de ellos destruya totalmente al otro. La opcin tambin depende de ambos
individuos.
TIERRA Y AIRE
La Tierra contiene Aire y lo necesita, pero el Aire no contiene Tierra ni la necesita. La Tierra debe
permanecer donde est, y slo se mueve mediante terremotos o fuerzas volcnicas o exteriores. El Aire se ha
emancipado de estas restricciones, se mueve por encima de la Tierra obedeciendo a su propio capricho, y no
cambia la Tierra ni se queda mucho tiempo en un mismo lugar. La Tierra se mantiene distante del Aire,
aparentemente ajena a su existencia. hasta que fuertes vientos turban las plantas y las flores que crecen sobre
su superficie, arraigadas en su seno. El resultado lo determina la opcin, que tambin depende de ambos
individuos.

149

TIERRA Y AGUA
El Agua busca un hogar, que encuentra dentro de la Tierra, al penetrar en sta y humedecerla, lo cual es una
bendicin para la Tierra... porque nicamente la penetracin del Agua permite que la Tierra sea la madre de
todo tipo de plantas vivientes, rboles y flores. Si no la enriquece el Agua, la Tierra permanece seca e intil.
Si carece de Tierra para humedecer, el curso del Agua est desprovisto de sentido y es igualmente intil.
Estos dos elementos estn destinados a necesitarse recprocamente. Pero un exceso de Agua puede convertir
la Tierra en un lodazal o una cinaga... y una dosis demasiado pequea de Agua puede perderse, puede
desaparecer dentro de las masas montaosas de Tierra. El resultado lo determina la opcin, que tambin
depende de ambos individuos.
AIRE Y AGUA
El Aire penetra en el Agua... la agita, la hace bullir en olas restallantes... y despus se aleja... infiltracin o
ataque ste sobre el cual el Agua no ejerce ningn control. Cuando el Agua penetra en el Aire en forma de
humedad, lo torna pesado. Pero, en el nterin, tambin suministra a toda la Naturaleza el bienaventurado alivio
de la lluvia, trocando mgicamente el Aire en su propio elemento, transmutacin esta sobre la cual el Aire no
ejerce ningn control. En ltima instancia, el desenlace no depende de la opcin de ninguno de los dos
individuos... sino slo de la Voluntad del Destino Supremo.

150

Configuraciones de signos solares


Configuracin de
signos solares 1-1

Configuracin de
signos solares 2-12

Configuracin de
signos solares 3-11

Aries-Aries
Tauro-Tauro
Gminis-Gminis
Cncer-Cncer
Leo-Leo
Virgo-Virgo
Libra-Libra
Escorpin-Escorpin
Sagitario-Sagitario
Capricornio-Capricornio
Acuario-Acuario
Piscis-Piscis

Aries-Piscis
Tauro-Aries
Gminis-Tauro
Cncer-Gminis
Leo-Cncer
Virgo-Leo
Libra-Virgo
Escorpin-Libra
Sagitario-Escorpin
Capricornio-Sagitario
Acuario-Capricornio
Piscis-Acuario

Aries-Gminis
Aries-Acuario
Tauro-Cncer
Tauro-Piscis
Gminis-Leo
Cncer-Virgo
Leo-Libra
Virgo-Escorpin
Libra-Sagitario
Escorpin-Capricornio
Sagitario-Acuario
Capricornio-Piscis

Configuracin de
signos solares 4-10

Configuracin de
signos solares 5-9

Con figuracin de
signos solares 6-8

Aries-Cncer
Aries-Capricornio
Tauro-Leo
Tauro-Acuario
Gminis-Virgo
Gminis-Piscis
Cncer-Libra
Leo-Escorpin
Virgo-Sagitario
Libra-Capricornio
Escorpin-Acuario
Sagitario-Piscis

Aries-Leo
Aries-Sagitario
Tauro-Virgo
Tauro-Capricornio
Gminis-Libra
Gminis-Acuario
Cncer-Escorpin
Cncer-Piscis
Leo-Sagitario
Virgo-Capricornio
Libra-Acuario
Escorpin-Piscis

Aries-Virgo
Aries-Escorpin
Tauro-Libra
Tauro-Sagitario
Gminis-Escorpin
Gminis-Capricornio
Cncer-Sagitario
Cncer-Acuario
Leo-Capricornio
Leo-Piscis
Virgo-Acuario
Libra-Piscis

Configuracin de
signos solares 7-7
Aries-Libra
Tauro-Escorpin
Gminis-Sagitario
Cncer-Capricornio Leo-Acuario
Virgo-Piscis

151

152

Como veris en la Rueda Krmica de la vida que figura en la pgina opuesta, las configuraciones de signos
solares se obtienen de la siguiente manera: Contando cada signo solar en s mismo como nmero uno, Aries
es la novena Casa respecto de Leo, y Leo es la quinta Casa respecto de Aries (contando siempre en direccin
inversa al sentido de las agujas del reloj). Por tanto, Aries-Leo es una configuracin de signos solares 5-9.
Tauro es la novena Casa respecto de Virgo, y Virgo es la quinta Casa respecto de Tauro. Por tanto, TauroVirgo tambin es una configuracin de signos solares 5-9. Como Tauro-Capricornio y Virgo Capricornio. El
mismo mtodo se puede emplear para identificar las diversas configuraciones de signos solares.
Observaris que los nmeros de todas las configuraciones de signos solares suman la cifra de dos dgitos
14. Menos los de la configuracin de signos solares 1-1. Esto implica un profundo misterio, y representa un
importante simbolismo mstico del principio Masculino-Femenino, relacionado con las almas gemelas.
El nmero 14 simboliza los catorce trozos de Osiris, que fue asesinado por su hermano, Set, y cuyo cuerpo
fue cortado en catorce fragmentos, al mismo tiempo que su alma era dividida en catorce partes. La misin del
alma gemela de Osiris Isis ha consistido en buscar estas catorce porciones de su consorte, durante
muchos y extenuantes eones. La leyenda dice que, en la era de Acuario, los catorce trozos de Osiris se
fusionarn en un hombre con la integridad de todas sus partes dispersas y ste se reunir con su alma
gemela, Isis. (Observad que el nombre Osiris contiene dentro de s el nombre de Isis.)
Todas las configuraciones de signos solares suman el nmero mstico catorce, de Isis-Osiris, lo cual permite
que cada combinacin de signos solares busque la unidad, siempre dentro de su propio esquema vibratorio.
Los amantes o consortes influidos por la vibracin de la configuracin de signos solares 1-1 slo pueden
reconocerse recprocamente como almas gemelas y satisfacer su Karma si uno de ellos tiene la suficiente
evolucin espiritual como para vibrar sintonizado con la Octava Superior del 1, que es trece. Cuando se
suma el 1 de la otra persona, esta combinacin da como resultado el nmero mstico catorce, de las almas
gemelas Isis-Osiris. Si ambas personas colocadas bajo la influencia de la configuracin de signos solares 1-1
vibran sintonizadas, con la Octava Superior de 1, que es el nmero 13, las dos estarn bajo la influencia
vibratoria del nmero ocho (8). (Dos veces 13 suma 26, que, al sumarse sus dos dgitos, se convierte en el
nmero ocho.) El nmero ocho representa el misterio de amor del DOBLE Crculo de la Serpiente. Dos
crculos o ceros, el uno encima del otro. (Vase la seccin Los doce misterios del amor, en el comienzo de
este libro.) Por tanto, cuando los dos seres implicados en una configuracin de signos solares 1-1 estn
igualmente evolucionados en el plano espiritual, es posible que experimenten el Sendero del Rayo del
Karma (con algunos otros, en distintas circunstancias particulares) y que alcancen rpidamente el
esclarecimiento juntos... aunque sta es una rara hazaa mstica.

153

154

Compatibilidades de signos solares


Configuracin de signos solares 1-1
Si vuestro propio signo solar es:

Aries ........................... Aries


Tauro.......................... Tauro
Gminis ..................... Gminis
Cncer ....................... Cncer
Leo .............................. Leo
Virgo............................ Virgo
Libra .......................... Libra
Escorpin .................. Escorpin
Sagitario ................... Sagitario
Capricornio............... Capricornio
Acuario ...................... Acuario
Piscis ........................ Piscis

Sobre vosotros influye la configuracin de signos solares 1-1 con los signos aqu enumerados frente a los
vuestros, en la amistad, los negocios, la familia o las relaciones amorosas.
En vuestra asociacin con estas personas nacidas bajo vuestro propio signo solar, ambos os sentiris
tentados de magnificar vuestras propias virtudes y defectos. Aumentar la intensidad de todos los rasgos
positivos de personalidad y carcter... as como la de los rasgos negativos. Deberis hacer un esfuerzo
constante para estimular recprocamente las buenas cualidades del signo solar que ambos comparts... y
para desalentar las malas cualidades del signo solar que ambos comparts, y para ser tolerantes con stas.
* Los aspectos recprocos entre los otros planetas, las Lunas y los ascendentes de los dos horscopos
modificarn ligeramente la relacin arriba descrita (en forma positiva o negativa), pero no alterarn
fundamentalmente la base del intercambio de la configuracin de signos solares 1-1, tal como ha sido
reseada.

155

Configuracin de signos solares 2-12

Si vuestro propio signo solar es:

Sobre vosotros influye la configuracin de signos solares 2-12 con los signos aqu enumerados frente a los
vuestros, en la amistad, los negocios, la familia o las relaciones amorosas.
En vuestra asociacin con estas personas, uno de vosotros sentir que l (o ella) tiene que aprender
muchas lecciones del otro (o la otra). El que tiene que impartir lecciones experimentar una compasin
inexplicable por las debilidades y errores de la otra persona, y comprender de una manera extraa las
motivaciones y el comportamiento marcadamente distintos del otro.
Los aspectos recprocos entre los otros planetas, las Lunas y los ascendentes de los dos horscopos
modificarn ligeramente la relacin arriba descrita (en forma positiva o negativa), pero no alterarn
fundamentalmente la base del intercambio de la configuracin de signos solares 2-12, tal como ha sido
reseada.

156

Configuracin de signos solares 3-11


Si vuestro propio signo solar es:

Aries ............ Gminis y Acuario


Tauro .................. Cncer y Piscis
Gminis ........... Aries y Leo
Cncer .............. Tauro y Virgo
Leo ..................... Gminis y Libra
Virgo ................ Cncer y Escorpin
Libra .................. Leo y Sagitario
Escorpin .............. Virgo y Capricornio
Sagitario.................... Libra y Acuario
Capricornio.. Escorpin y Piscis
Acuario ........... Aries y Sagitario
Piscis .............. Tauro y Capricornio

Estis implicados en una configuracin de vibraciones de signos solares 3-11 con los signos aqu enumerados
frente a los vuestros, en la amistad, los negocios, la familia o las relaciones amorosas.
Experimentaris un fuerte vnculo de amistad, cualquiera que sea la asociacin que comparts con estos
individuos. Habr confianza mutua, y una gran fluidez de comunicacin, en un sentido y otro. Sois muy
diferentes, pero estas diferencias ejercen poco o ningn efecto sobre vuestra estima recproca. Podra existir
un sentimiento de responsabilidad, algn tipo de deber ineludible, que os hace confluir y que refuerza el
vnculo que os une. Os resultar fcil conversar con estos individuos, y os estimularis constantemente el uno
al otro para haceros cambiar los hbitos y las situaciones existentes.
Probablemente forjaris amistades muy ntimas con estas personas, y seguiris siendo amigos siempre.
Generalmente toda reyerta se resolver, perdonar y olvidar en seguida. Es posible que riis y discrepis a
menudo, y que os sintis fastidiados por alguna obligacin mutua que os ata el uno al otro, y que sin embargo
no podis eludir, e incluso cuando la asociacin parezca ser un captulo concluido, reaparecer meses o aos
ms tarde, para recomenzar nuevamente.

* Los aspectos recprocos entre los otros planetas, las lunas y los ascendentes de los dos horscopos
modificarn ligeramente la relacin arriba descrita (en forma positiva o negativa), pero no alterarn
fundamentalmente la base del intercambio de la configuracin de signos solares 3-11, tal como ha sido
reseada.

157

Configuracin de signos solares 4-10


Si vuestro propio signo solar es:

Aries ................
Tauro................
Gminis ............
Cncer ..............
Leo ...................
Virgo ................
Libra ................
Escorpin .........
Sagitario ..........
Capricornio ......
Acuario ............
Piscis ................

Cncer y Capricornio
Leo y Acuar io
Virgo y Piscis
Libra y Aries
Tauro y Escorpin
Gminis y Sagitario
Cncer y Capricornio
Leo y Acuar io
Virgo y Piscis
Aries y Libra
Tauro y Escorpin
Gminis y Sagitario

Sobre vosotros influye la configuracin de signos solares 4-10 con los signos aqu enumerados frente a los
vuestros, en la amistad, los negocios, la familia o las relaciones amorosas.
No siempre, pero s con sorprendente frecuencia, experimentaris una notable tensin o conflicto de
personalidades en presencia de las personas nacidas bajo los signos solares aqu enumerados frente a los
vuestros, ya sea porque las desaprobis, o porque intuyis que ellas os desaprueban de alguna manera. Es
posible que una persona se ofusque en razn de que la otra intenta imponerle una disciplina estricta. Siempre
existir alguna magnitud de restriccin mental y emocional, por diversas razones.

* Si otros planetas (sobre todo las lunas y los ascendentes) tienen un aspecto mutuo armonioso
(conjuncin, sextil o trgono), vosotros y estas personas intercambiaris una devocin, una lealtad y un
respeto vehementes, en razn de lo cual las innegables diferencias bsicas de motivacin y personalidad sern
menos frustrantes, menos irritantes, aunque las grandes diferencias de enfoque y de objetivos continuarn en
pie.
* Si los otros planetas de vuestros horscopos (sobre todo las lunas y los ascendentes) tienen un aspecto en
cuadratura u oposicin (negativo), vuestras relaciones con estas personas sern en verdad tensas y difciles, y
necesitaris tener casi paciencia de santos para superar las dificultades... aunque las recompensas que
recibiris por dicha superacin sern inmensas.

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Configuracin de signos solares 5-9


Si vuestro propio signo solar es:

Aries ................... Leo y Sagitario


Tauro .................. Virgo y Capricornio
Gminis ............... Libra y Acuario
Cncer ................ Escorpin y Piscis
Leo ...................... Aries y Sagitario
Virgo ................... Tauro y Capricornio
Libra .................... Gminis y Acuario
Escorpin ............ Cncer y Piscis
Sagitario ............. Aries y Leo
Capricornio .......... Tauro y Virgo
Acuario ................ Gminis y Libra
Piscis ................... Cncer y Escorpin

Sobre vosotros influye la configuracin de signos solares 5-9 con los signos aqu enumerados frente a los
vuestros, en la amistad, los negocios, la familia o las relaciones amorosas.
No siempre, pero s con sorprendente frecuencia, experimentaris con estas personas una fcil empata,
estmulos mentales y afinidad emocional (o satisfaccin romntica).
Existir una fuerte simpata entre vosotros, y generalmente vuestros malentendidos no sern graves ni
perdurables. Las posibilidades de armonizar son excelentes, y tendris que hacer menos esfuerzos que con las
de cualquier otro signo solar para entablar una relacin feliz sobre una base permanente.

* Si otros planetas (especialmente las lunas y los ascendentes) de los dos horscopos tienen un aspecto mutuo
en cuadratura u oposicin (negativo), entre vosotros y estas personas se producirn algunos choques de
personalidad y tensiones, que harn tambalear de cuando en cuando la compatibilidad que comparts, aunque
la empata y la comprensin bsicas permanecern inconmovibles.
* Si otros planetas (especialmente las Lunas y los ascendentes) de los dos horscopos estn en un aspecto
armonioso (conjuncin, sextil o trgono), vuestras relaciones con estas personas sern extraordinariamente
dichosas, apacibles y comprensivas.

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Configuracin de signos solares 6-8


Si vuestro propio signo solar es:

Aries .......... Virgo y Escorpin


Tauro.......... Libra y Sagitario
Gminis ...... Escorpin y Capricornio
Cncer ........ Sagit ario y Acuario
Leo ............. Capricornio y Piscis
Virgo ......... Ar ies y Acuar io
Libra .......... Tauro y P iscis
Escorpin ... Ar ies y Gminis
Sagitario ... T auro y Cncer
Capr icornio Gminis y Leo
Acuario ....... Cncer y Virgo
Piscis ........... Leo y L ibr a

Estis implicados en una configuracin de vibraciones de signos solares 6-8 con los signos aqu enumerados
frente a los vuestros, en la amistad, los negocios, la familia o las relaciones amorosas.
Tendris algunos problemas para comunicaros con estos individuos. Pero os sentiris misteriosamente
intrigados por su enigmtico carisma y poderosamente atrados por su hechizo. Si el vnculo que os une es una
relacin amorosa, este individuo ejercer sobre vosotros una irresistible atraccin sexual.
Si la relacin no es amorosa, sino de amistad, de negocios o de familia, este individuo os atraer, no
mediante la qumica sexual, sino mediante un inters compartido en lo sobrenatural la muerte, el
nacimiento, la reencarnacin, la adopcin y todas las cuestiones espirituales, o mediante situaciones
asociadas con fondos que no os pertenecen a ninguno de vosotros, o sea, dinero ajeno. Habr momentos en
que este individuo parecer innecesariamente reservado en vuestra asociacin.
De alguna manera, estos individuos desearn ayudaros, y vosotros desearis ayudarlos a ellos. Uno de
vosotros servir de buen grado al otro, u os serviris recprocamente, con poco o ningn resentimiento, y uno
proteger a menudo al otro de quienes pretendan hacerle dao. Quiz habr momentos en que los favores
tributados inspirarn resentimiento, pero no habr otra alternativa. En esta configuracin de vibraciones, los
servicios prestados siempre sern recompensados por la fascinacin de la asociacin misma. En cierta forma,
el uno beneficiar inmensamente al otro mediante esta relacin, y el que sirve generalmente seguir siendo
leal.

* Los aspectos recprocos entre los otros planetas, las Lunas y los ascendentes de los dos horscopos modificarn
ligeramente la relacin arriba descrita (en forma positiva o negativa), pero no alterarn fundamentalmente la
base del intercambio de la configuracin de signos solares 6-8, tal como ha sido reseada.

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Configuracin de signos solares 7-7


Si vuestro propio signo solar es:

Aries...................................... Libra
Tauro ..................................... Escorpin
Gminis ................................ Sagitario
Cncer ................................. Capricornio
Leo ........................................ Acuario
Virgo ..................................... Piscis
Libra....................................... Aries
Escorpin ............................... Tauro
Sagitario ................................. Gminis
Capricornio ............................ Cncer
Acuario .................................. Leo
Piscis ..................................... Virgo

Estis implicados en una configuracin de signos solares 7-7 con los signos aqu enumerados frente a los
vuestros en la amistad, los negocios, la familia o las relaciones amorosas.
No siempre, pero s con frecuencia, os sentiris fsicamente atrados hacia los individuos de sexo opuesto
aqu enumerados frente a los vuestros (y tambin situados frente a los vuestros en la Rueda krmica), o los
admiraris y respetaris secretamente, porque dichos individuos poseen las cualidades de carcter y los rasgos
de personalidad de los que vosotros mismos carecis. La atraccin y el deseo de emulacin sern fuertes.
Sin embargo, es posible que os sintis incmodos con aquellos individuos de vuestro mismo sexo que
nacieron bajo este signo solar, o que los envidiis o experimentis respecto de ellos un fuerte sentimiento de
competencia.

* Los aspectos recprocos entre los otros planetas, las Lunas y los ascendentes de los dos horscopos
modificarn ligeramente la relacin arriba descrita (en forma positiva o negativa), pero no alterarn
fundamentalmente la base del intercambio de la configuracin de signos solares 7-7, tal como ha sido
reseada.

161

A todos aquellos que aman...


Esperad un milagro!
Los milagros son posibles. Los milagros ocurren. No son interrupciones de las leyes fsicas. No son
trasgresiones de las leyes de la Naturaleza. Son confirmaciones de las leyes de la meta-fsica (ms all de la
fsica) y afirmaciones de las mayores profundidades de la ley de la Naturaleza. Slo el Espritu, el ngel
Supremo de vosotros mismos, controla estas mayores profundidades... que an no han sido descubiertas, ni
siquiera por los cientficos que buscan e investigan con ms afn. Pero esto no niega su existencia, porque
sern descubiertas en la Nueva Era!
Actualmente la ciencia slo se ocupa de las fuerzas materiales, y omite reconocer a las fuerzas
espirituales. Sin embargo, qu es la fuerza material sino la manifestacin visible de la fuerza espiritual que se
oculta detrs de ella? Aceptar la manifestacin material y negar la fuerza espiritual que la genera y la controla
implica colocarse en la posicin ilgica de aceptar un efecto... y de negar su causa.
Una vez que habis aceptado que la causa fuerza espiritual y el efecto fuerza material conforman una
unidad perfecta, cmo os atrevis a alimentar la pretensin de fijar un lmite a las manifestaciones de
cualquiera de estas fuerzas... y especialmente al poder de la causa y el efecto combinados? Vosotros y
vuestro supraconsciente controlis vuestros milagros. Para producirlos, basta el enlace de la Verdad con la
Fe.
Pax et Bonum = Verum et Unum Buscad la Verdad y sta os har libres!i

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Prefacio

Los doce misterios del Amor

Las doce iniciaciones del amor

El misterio de amor de Aries

El misterio, de amor de Tauro

El misterio de amor de Gminis

El misterio de amor de Cncer

El misterio de amor de Leo

El misterio de amor de Virgo

El misterio de amor de Libra

El misterio de amor de Escorpin

El misterio de amor de Sagitario

El misterio de amor de Capricornio

El misterio de amor de Acuario

El misterio de amor de Piscis

Su signo solar

Perodos natales de los signos


solares

Combinaciones de los signos del


amor

Gminis - Aries

Gminis - Tauro

Gminis - Gminis

Gminis - Cncer

Gminis - Leo

Gminis - Virgo

Gminis - Libra

Gminis - Escorpin

Gminis - Sagitario

Gminis - Capricornio
Gminis - Acuario

Gminis - Piscis

Tipos de personalidad

La misin krmica de los doce signos solares


La combinacin de los elementos

Configuraciones de signos solares

La Rueda Krmica de la Vida

Aspectos Mutuos

Compatibilidades de signos solares


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Configuracin de signos solares 1-1


Configuracin de signos solares 2-12
Configuracin de signos solares 3-11
Configuracin de signos solares 4-10
Configuracin de signos solares 5-9
Configuracin de signos solares 6-8
Configuracin de signos solares 7-7
A todos aquellos que aman...

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