INFOJUS - Dossier Fideicomiso PDF
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ar
Dossier
Fideicomiso
ndice General
NORMATIVA .................................................................................................................... 3
LEY 24.441 ........................................................................................................................................... 3
JURISPRUDENCIA ................................................................................................. 20
Acto fiduciario ............................................................................................................. 20
Caracteres de fideicomiso.............................................................................................................. 29
Caracteres de fideicomiso.............................................................................................................. 30
Caracteres de fideicomiso.............................................................................................................. 30
Caracteres de fideicomiso.............................................................................................................. 31
Daos y perjuicios, responsabilidad contractual, improcedencia de responsabilidad del
banco, Banco Hipotecario SA, acto fiduciario, fideicomiso de garanta ................................. 31
Fideicomiso de garanta................................................................................................................. 34
Concepto de fideicomiso de garanta ........................................................................................... 35
Fideicomiso de garanta................................................................................................................. 36
Fideicomiso de garanta................................................................................................................. 36
Naturaleza jurdica de fideicomiso de garanta .......................................................................... 37
Concepto de fideicomiso de garanta, alcances de fideicomiso de garanta ........................... 38
Concepto de fideicomiso de garanta ........................................................................................... 38
Rgimen legal de fideicomiso de garanta................................................................................... 39
DOCTRINA ....................................................................................................................... 51
Defensa del Consumidor Inmobiliario y el Fideicomiso. A propsito del Dao Punitivo ... 51
Fideicomiso: Elementos y caracteres del "fideicomiso inmobiliario" .................................. 67
El fideicomiso como posible estrategia de fraude ................................................................ 82
Tratamiento impositivo y aspectos jurdicos de los fideicomisos ........................................ 99
El fideicomiso de garanta y el concurso del fiduciante ..................................................... 102
Algunas consideraciones sobre el "fideicomiso de garanta" ............................................. 108
Fideicomiso de garanta. Un instrumento eficaz ............................................................... 118
Perfiles actuales en los negocios de garanta...................................................................... 151
Inconstitucionalidad de la ley 25.798 de "salvataje" hipotecario y su reglamentacin ..... 163
Algunas notas sobre un tipo de garanta autnoma: el fideicomiso de garanta ............... 170
NORMATIVA
LEY 24.441
REGULACION DE LOS CONTRATOS DE FIDEICOMISO, LEASING,
LETRAS HIPOTECARIAS
Ley 24.441
BUENOS AIRES, 22 de diciembre de 1994
Boletn Oficial, 16 de enero de 1995
Vigente, de alcance general
ID infojus LNS0003980
Tampoco podrn agredir los bienes fideicomitidos los acreedores del fiduciante,
quedando a salvo la accin de fraude. Los acreedores del beneficiario podrn
ejercer sus derechos sobre los frutos de los bienes fideicomitidos y subrogarse en
sus derechos.
ARTICULO 16.- Los bienes del fiduciario no respondern por las obligaciones
contradas en la ejecucin del fideicomiso, las que slo sern satisfechas con los
bienes fideicomitidos. La insuficiencia de los bienes fideicomitidos para atender a
estas obligaciones, no dar lugar a la declaracin de su quiebra. En tal supuesto y
a falta de otros recursos provistos por el fiduciante o el beneficiario segn
previsiones contractuales, proceder a su liquidacin, la que estar a cargo del
fiduciario, quien deber enajenar los bienes que lo integren y entregar el
producido a los acreedores conforme al orden de privilegios previstos para la
quiebra; si se tratase de fideicomiso financiero regirn en lo pertinente las normas
del artculo 24.
ARTICULO 17.- El fiduciario podr disponer o gravar los bienes fideicomitidos
cuando lo requieran los fines del fideicomiso, sin que para ello sea necesario el
consentimiento del fiduciante o del beneficiario, a menos que se hubiere pactado lo
contrario.
ARTICULO 18.- El fiduciario se halla legitimado para ejercer todas las acciones
que correspondan para la defensa de los bienes fideicomitidos, tanto contra
terceros como contra el beneficiario.
El juez podr autorizar al fiduciante o al beneficiario a ejercer acciones en
sustitucin del fiduciario, cuando ste no lo hiciere sin motivo suficiente.
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JURISPRUDENCIA
Acto fiduciario
ENCICLOPEDIA INFOJUS
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ENCICLOPEDIA INFOJUS
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ENCICLOPEDIA INFOJUS
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ENCICLOPEDIA INFOJUS
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ENCICLOPEDIA INFOJUS
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ENCICLOPEDIA INFOJUS
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Caracteres de fideicomiso
SUMARIO DE FALLO
22 de diciembre de 2005
Id Infojus: SUQ0016870
TEXTO
OBLIGACIONES Y CONTRATOS, carcter de contrato de fideicomiso
Los autores coinciden en que el contrato de fideicomiso -cualquiera de sus tipospuede resultar un contrato oneroso o gratuito, segn se haya fijado o no una
retribucin a favor del fiduciario.- No obstante, la onerosidad de la tarea del
fiduciario se presume, ya que el art. 8 [1] de la Ley Nro. 24.441 establece que ste
tendr derecho al reembolso de los gastos y a una retribucin; y si no hubiese sido
fijada, la fijar el Juez, considerando la ndole de la encomienda y la importancia
de los deberes a cumplir, de lo que se infiere que la gratuidad -en su caso- debe
surgir expresa del mismo instrumento.
Legislacin
[1] REGULACION DE LOS CONTRATOS DE FIDEICOMISO, LEASING, LETRAS
HIPOTECARIAS, Art. 8
Ley Nacional 24.441. 22/12/1994
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ENCICLOPEDIA INFOJUS
Caracteres de fideicomiso
SUMARIO DE FALLO
22 de diciembre de 2005
Id Infojus: SUQ0016878
TEXTO
OBLIGACIONES Y CONTRATOS, carcter de contrato de fideicomiso
Que un sector de la doctrina enmarca al fideicomiso dentro de los contratos reales,
confundiendo la naturaleza del contrato con los elementos que lo componen.
Caracteres de fideicomiso
SUMARIO DE FALLO
22 de diciembre de 2005
Id Infojus: SUQ0016871
TEXTO
OBLIGACIONES Y CONTRATOS, carcter de contrato de fideicomiso
Cualquiera fuera el tipo de fideicomiso considerado por su finalidad, el contrato es
oneroso en el marco de aquella Ley; si los celebrados encuadran en la figura
genrica del fideicomiso, en el fideicomiso de garanta (o en ///garanta), o si se
trata de un tipo mixto: fideicomiso de garanta y de administracin, no vara aqul
carcter.
Caracteres de fideicomiso
SUMARIO DE FALLO
22 de diciembre de 2005
Id Infojus: SUQ0016877
TEXTO
OBLIGACIONES Y CONTRATOS, carcter de contrato de fideicomiso
El fideicomiso es consensual porque queda perfeccionado con el acuerdo de
voluntades, que conferir accin para la entrega de la cosa.
Fideicomiso de Garantia
ENCICLOPEDIA INFOJUS
Fideicomiso de garanta
SUMARIO DE FALLO
22 de diciembre de 2005
Id Infojus: SUQ0016875
TEXTO
OBLIGACIONES Y CONTRATOS, contrato de fideicomiso, fideicomiso de
garanta
An cuando la Ley 24.441 [1] ha pretendido remozar nuestro ordenamiento con
institutos que permitan movilizar la actividad econmica y captar la inversin, la
prudencia indica que en un sistema causalista como el nuestro, debe tenerse
cuidado con la total autonoma de la garanta, dado que existen diversos grados de
accesoriedad.- Siguiendo la opinin de Alicia PUERTA DE CHACN, desde una
postura moderada, interpreto que no es necesaria ni la especialidad ni la
accesoriedad inicial, esto es, al momento de la constitucin de la propiedad
fiduciaria en garanta; pero ciertamente s lo ser al momento de la realizacin del
bien fideicomitido.- El crdito debe existir y ser exigible en la oportunidad de cobro
y el instrumento que lo acredite -con todos sus elementos esenciales- habr de
completarse con el de garanta.- Inicialmente, el contrato de fideicomiso como
ttulo o causa debe contener el contrato de aseguramiento regulatorio de todas las
alternativas de crdito (sustitucin, ampliacin, etc.) y establecer al menos la
relacin preexistente entre el potencial acreedor y el potencial deudor.
Legislacin
[1] REGULACION DE LOS CONTRATOS DE FIDEICOMISO, LEASING, LETRAS
HIPOTECARIAS
Ley Nacional 24.441. 22/12/1994
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ENCICLOPEDIA INFOJUS
Fideicomiso de garanta
SUMARIO DE FALLO
17 de noviembre de 2005
Id Infojus: SUZ0008672
TEXTO
OBLIGACIONES Y CONTRATOS, fideicomiso de garanta
El fideicomiso en garanta aparece como el esquema ms adecuado para proteger
los intereses en juego, protegiendo as un verdadero inters social, como es el
acceso a la vivienda.-
Fideicomiso de garanta
SUMARIO DE FALLO
17 de noviembre de 2005
Id Infojus: SUZ0008673
TEXTO
OBLIGACIONES Y CONTRATOS, fideicomiso de garanta
Dado que nuestro ordenamiento legal proporciona al deudor fiduciante los medios
para encauzar la actuacin del acreedor, o en su caso obtener el resarcimiento
correspondiente, el contrato de fideicomiso en garanta no puede valorarse como
contrario a la moral y a las buenas costumbres.-
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ENCICLOPEDIA INFOJUS
TEXTO
OBLIGACIONES Y CONTRATOS, concepto de fideicomiso de garanta
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ENCICLOPEDIA INFOJUS
Fideicomiso de garanta
SUMARIO DE FALLO
17 de noviembre de 2005
Id Infojus: SUZ0008668
TEXTO
OBLIGACIONES Y CONTRATOS, fideicomiso de garanta
El fideicomiso en garanta, aunque coincida el fiduciario con el beneficiario
principal es lcito, siempre y cuando se lo haya concebido en forma prudente y se
haya determinado en forma clara y precisa los procedimientos a seguir en caso de
incumplimiento y el destino de los posibles remanentes que pudieren quedar luego
de liquidado y satisfecho el crdito, no siendo bice al respecto la prohibicin del
art. 7 de la ley 24.441.-
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ENCICLOPEDIA INFOJUS
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ENCICLOPEDIA INFOJUS
Fideicomiso de garanta
SUMARIO DE FALLO
20 de agosto de 2003
Id Infojus: SUZ0109590
TEXTO
OBLIGACIONES Y CONTRATOS, fideicomiso de garanta
El fiduciario no puede incorporar los bienes del patrimonio separado al suyo propio,
o sea adjudicarse para s el objeto dado en garanta, antes ni despus de que se
verifique el pago de la deuda.
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Fideicomiso refinanciacin
ENCICLOPEDIA INFOJUS
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ENCICLOPEDIA INFOJUS
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ENCICLOPEDIA INFOJUS
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ENCICLOPEDIA INFOJUS
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ENCICLOPEDIA INFOJUS
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DOCTRINA
ENCICLOPEDIA INFOJUS
8 de agosto de 2011
www.saij.jus.gov.ar
Id Infojus: DACF110045
1.- INTROITO. JUSTIFICACIN Varias son las aristas que resultan comprendidas
en esta ley; tan vasto campo de aplicacin resultara difcilmente abarcado por este
trabajo, el cual al menos tratara de abordar el esquema elemental que plantea la
nueva ley del consumidor -26.361 [1]-; el particular tpico -daos punitivos- figura
extraa a nuestro sistema de responsabilidad civil, netamente resarcitorio, esto es
el "dao punitivo".- Ese marco normativo creo que resulta de gran importancia
contrastado con la interpretacin y aplicacin de otros institutos del derecho, como
es en este caso el fideicomiso inmobiliario, sobre el cual har una breve referencia
de cmo impactan las disposiciones de esta ley consumerista y de sus nuevos
institutos que esta legislo -dao punitivo2.- CONSUMO Y FIDEICOMISO INMOBILIARIO
I.- La regulacin en nuestro derecho.
La ley del consumidor, vino a reforzar la existencia y pervivencia de una verdadera
relacin sinalagmtica, es decir, trata de alguna manera de reforzar a la parte dbil
de la contratacin -consumidor-, frente a la otra parte preponderante de la relacin
contractual -proveedor-, ya que el derecho Privado contemporneo se encuentra
profundamente afectado por los cambios econmicos- sociales signados por la
masificacin, la tecnologa y la globalizacin, 1 contexto en el cual se inserta esta
figura que contiene elementos de la tecnologa, la masificacin que responde a
nuevas necesidades negociales y culturales como es el "fideicomiso inmobiliario".Lpez de Zabala, 2 caracterizaba la realidad contractual, -hoy puesta en crisis
debido a la deficiencia de principios como la plena autonoma de la voluntad, la
libertad plena de autodeterminacin de las partes etc- como regida por los
principios de la libertad de conclusin y de configuracin del negocio jurdico. El
1
NICOLAU Noem Lidia. "Fundamentos de derecho contractual. Teora general del contrato". Ed. La Ley.2009. Tomo I.
Pg.421.
LOPEZ DE ZAVALIA, Fernando J., Teora de los contratos. Parte general. Ed. Zabala. Buenos Aires. ao 2003.
51
ITURRASPE, Jorge Mosset, Del micro al macro sistema y viceversa. el dialogo de las fuentes. Rubinzal-Culzoni.
FARINA, Juan M., Defensa del consumidor y del usuario. Comentario exegtico de la ley 24.240 con las reformas de
la ley 26.361, 4 edicin actualizada y ampliada, Astrea, Buenos Aires, 2008, pg. 22.
5
Art. 42 Constitucin Nacional: "Los consumidores y usuarios de bienes y servicios tienen derecho, en la relacin de
consumo, a la proteccin de su salud, seguridad e intereses econmicos; a una informacin adecuada y veraz; a la
libertad de eleccin, y a condiciones de trato equitativo y digno.
52
que esta ley de consumo. Protege de esta forma no solo a quienes contraten, sino
a toda la relacin de consumo, entendida ahora como vinculo jurdico entre
consumidor y proveedor, que podr tener principalmente como fuentes a la
voluntad unilateral, al acto ilcito y al contrato -pudiendo ser este ltimo oneroso o
gratuito- en la medida que tenga como propsito -mediato o inmediato- una
relacin de consumo. 6 Aclaracin de por medio, primeramente veremos una
caracterizacin genrica del usuario-consumidor, y proveedor para luego analizar
el objeto de la relacin de consumo.- Luego de ello podremos efectuar algunas
consideraciones referentes a la aplicacin de esta ley - en particular de la figura del
dao punitivo que incorpora- a la figura que aqu tratamos de esclarecer, esto es el
"fideicomiso inmobiliario".II.1.- Elemento subjetivo La ley distingue en sus primeros artculos, a dos figuras o
roles o posiciones contractuales que deben asumir las partes a fin de que le sea
alcanzada la relacin de consumo, una la del consumidor y otra la del proveedor.
A fin de ceir el mbito de aplicacin al que pretendemos enderezar su estudio esto es al fideicomiso como contrato-, la pregunta a responder podramos
formularla de la siguiente manera alcanza, este rgimen de consumo al fiduciario,
beneficiario y fiduciante inmobiliario?
a.- Usuario- Consumidor- o (adquirente del inmueble FIDUCIANTEBENEFICIARIO).
A esta parte o esta posicin generalmente ser ocupada por el adquirente del bien
inmueble en un fideicomiso inmobiliario, es decir quien en definitiva adquiere el rol
de fiduciante adherente o beneficiario.
El art. 1 de la ley de Defensa del Consumidor [4] caracteriza al consumidor como
toda "...persona fsica o jurdica que adquiere o utiliza bienes o servicios en forma
gratuita u onerosa como destinatario final, en beneficio propio o de su grupo
familiar o social...".
Las autoridades proveern a la proteccin de esos derechos, a la educacin para el consumo, a la defensa de la
competencia contra toda forma de distorsin de los mercados, al control de los monopolios naturales y legales, al de la
calidad y eficiencia de los servicios pblicos, y a la constitucin de asociaciones de consumidores y de usuarios.
La legislacin establecer procedimientos eficaces para la prevencin y solucin de conflictos, y los marcos
regulatorios de los servicios pblicos de competencia nacional, previendo la necesaria participacin de las asociaciones
de consumidores y usuarios y de las provincias interesadas, en los organismos de control"
6
NICOLAU... "Fundamentos de derecho contractual. Teora general del contrato" ob. Cit. Pg. 425. El resaltado me
pertenece.53
Lo que caracteriza a esta figura "consumidor" mas all del objeto -que se modifico
el trmino "contrata" por adquisicin o utilizacin de bienes....etc, que ser luego
brevemente determinado-, requiere que sea "destinatario final de los bienes", esto
significa que el producto o servicio que adquiere o utiliza, es retirado del mercado,
no volvindolo a reinsertar en l mediante mediante su incorporacin al nuevo
proceso de elaboracin de bienes o prestacin de servicio, 7 de esta inteligencia se
desprende que necesariamente requiere no solo sacarlo del mercado, sino que
tambin de manera definitiva lo no ocurrira en caso de utilizarlo como materia
prima.
Incorpora igualmente la reforma a ley 24.240 [3]. (ley 26.361 [1]), un nuevo
concepto de consumidor o como correctamente debera ser utilizado de "usuario"
esto es quien utiliza bienes o servicios sin ser parte de la relacin de consumo, as,
le asigna tal carcter a quienes sin ser parte de la relacin de consumo, a) como
consecuencia o en ocasin de ella adquiere o utiliza bienes y b) a quien de
cualquier manera esta expuesto a una relacin de consumo. A quien se lo llama
consumidor "bystander" 8 (art. 1 ley 24.240 [4]).
b.- Proveedor (Constructor, Developer, Desarrollador, comercializador) o
FIDUCIARIO- La ley no se conforma con la existencia de un consumidor para
calificar la obligacin cuya fuente es un vnculo jurdico en el que exista solo un
consumidor, sino que la proteccin del rgimen consumerista se hace efectiva
cuando frente al consumidor o usuario existe esta otra persona en el polo pasivo
de la obligacin denominada "proveedor". A la misma la ley la califica como aquella
persona "fsica o jurdica" de naturaleza pblica o privada, que desarrolla de
manera profesional, aun ocasionalmente, actividades de produccin, montaje,
creacin, construccin, transformacin, importacin, concesin de marca,
distribucin y comercializacin de bienes y servicios, destinados a consumidores o
usuarios.- Nuevamente aqu la ley define una cualidad especial, esto es la de
desarrollarse manera "profesional". Resulta importante definir tal concepto, pues
por nuestra tradicin jurdica es comn emparentar la profesionalidad con la
habitualidad, tal como se desprende de quienes se dedicaron a estudiar los
elementos primarios del derecho Comercial, pero aqu podemos observar que
luego de enunciar tal requisito el plexo normativo expresa "...de manera
profesional an ocasionalmente". Se podra preguntar entonces "se pude ser
profesional an ocasionalmente?" 9 ante lo que se responde que la Ley de Defensa
del Consumidor no pide habitualidad en el proveedor sino conocimiento del
negocio, es decir, un grado de "saber" u "oficio" que pone a esa parte en situacin
7
FRUSTRAGLI Sandra A. HERNANDEZ, Carlos A. "Primeras consideraciones sobre los alcances de la reforma a la
ley de defensa del Consumidor, con especial referencia a la materia contractual" J.A. Nmero Especial. Rgimen de
defensa del consumidor. 2008. II. Pg.4/5.
8
Se puede ver en referencia al tema el trabajo de ALTERINI Atilio, A " Las reformas de la ley de consumidor. Primera
lectura veinte aos despus". LL del 10.04.2008.9
Ver. ROSSI, Jorge Oscar, en "La reforma al rgimen del consumidor por ley 26.361". Ed. Abeledo Perrot. Bs. As.
2008. Pag 25.54
ARIZA, Ariel. "contratacin inmobiliaria y defensa del consumidor". La reforma del rgimen de defensa del
Ponencia del XXII JORNADAS NACIONALES DE DERECHO CIVIL""V CONGRESO NACIONAL DE DERECHO
CIVIL" Crdoba, 23, 24 y 25 de setiembre de 2009. "aplicacin de la ley de defensa del consumidor al corretaje
inmobiliario"
55
Si bien prevalece la interpretacin efectuada en este prrafo, caber recordar que algunos sealan que la aclaracin
efectuada parece haberse introducido -conforme los fundamentos del proyecto- con el propsito de dejar afuera de la
Ley de defensa del consumidor a los inmuebles, salvo las operaciones antes sealadas. Para ello ver el despacho que
fundamentaba la ley en su art. 10. Ver tambin en Pg. 6 Ob. Cit, de Frustrali .Hernndez, Ja. 2008-II.
13
GREGORINI CLUSELLAS, Eduardo. El consumidor inmobiliario. Su tutela en la ley 24240 reformada por la ley
26.321". J.A-II. Pag. 50/51. Ver tambin C. Nac. Cont. Adm. Sala 2. "Banco Hipotecario Nacional c. Ciudad de Bs. As."
(Ja. II- 342; y LL 2005 E-436 )
14
l BOE de 30 de noviembre publicaba el Real Decreto Legislativo 1/2007, de 16 de noviembre ( RCL 2007\2164) , por
el que se aprueba el Texto Refundido de la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios ( RCL
1984\1906) y otras leyes complementarias. Vid en www.aranzadi.es
57
Esta particular figura resulta de gran relevancia en el mbito de los inmuebles. As, -explica Iturraspe- que para el
Cdigo Civil, el adquirente de bienes, con base en la aptitud presumida, no podra accionar por vicios o derechos
visibles o aparentes, si eran tales, si pudieron ser observados y motivar el rechazo del producto, no se justificaba que
dieran pie a reclamos por parte de quien, aunque de modo tcito o callado, habra aceptado el bien brindado por el
proveedor. De ah que el articulo 2164 pusiera el acento en el carcter "oculto" del vicio o defecto y agregaba que de
"haberlos conocido adquirente, no lo habra adquirido o habra dado menos..." Otra muy diferente es la solucin del
microsistema, que al descartar la aplicacin del art. 2170, y sostener la aplicacin del art. 2176, posibilita que
consumidores y usuarios puedan promover reclamos aun por vicios que son aparentes, pudieron ser conocidos e
incluso que los adquirentes por su profesin u oficio deberan conocer. (Iturraspe. Ob. Cit. Revista de derecho privado y
comunitario. Pg. 28 )
58
Sin perjuicio de la interpretacin dada al mismo de hacer extensivo el concepto de volver las cosas al estado
anterior, tanto a la reparacin del dao mismo como tambin a la devolucin de las ganancias que otro ocasion con el
dao.
17
Bustamente Alsina entiende que Puede s afirmarse la conviccin de que los punitive damages tendran un
conducido a ciertos autores, a sostener que hay pocas o ninguna sentencia sobre los "daos punitivos" o dommages
intrets punitifs que no puedan ser explicados como ejemplos de dommages intrets agravados.Sin embargo no es
dudoso desde el fallo "Rookes v. Barnard" dictado en Inglaterra por la Cmara de los Lores en 1964, que los
dommages intrets punitifs forman una categora aparte. La sentencia se dict en un caso de intimidacin durante un
litigio comercial. Lord Devlin consagr en su opinin algunos desarrollos de dommages intrets punitifs. Reconoci as
que la funcin primera de los daos y perjuicios es de reparar el perjuicio sufrido por la vctima, mientras que los
dommages intrets punitifs tienen por objeto castigar y disuadir al culpable, lo que constituye una institucin intermedia
entre el derecho penal y el derecho civil. Lord Devlin crey conveniente por lo tanto limitarlos a tres tipos de situaciones
La primera comprende el comportamiento opresivo, arbitrario o inconstitucional de los funcionarios. La fuente y el
origen de esta categora fue el famoso caso Wilkes v. Wood. Lord Devlin se preocup de no extender esta categora a
los actos coercitivos de personas privadas, fsicas o morales. Ella se aplica por lo tanto al gobierno y a sus
funcionarios, pues el uso de sus poderes debe ser siempre subordinado al deber de servicio.La segunda comprende
los casos en los cuales el demandado ha actuado conscientemente de modo de obtener un provecho superior a la
reparacin susceptible de ser atribuido al accionante. Esta situacin es frecuente en las cuestiones de difamacin o de
atentados a la vida privada.La tercera comprende los casos en que los dommages entrets exemplaires son
expresamente previstos por la ley (especialmente en casos de falsificacin: copyright acts). (Los llamados "daos
punitivos" son extraos a nuestro sistema de responsabilidad civil. Bustamante Alsina, Jorge. LL A LEY 1994-B, 860Responsabilidad Civil Doctrinas Esenciales Tomo III, 267) Caso Ford Pinto "Grimshaw vs. Ford Motor Company" Cort
of Appeal of California, Fourth Appellate District, division two. 119 Cal App 3 D. 757; 174 Cal RPTR 348, se impuso una
sancin punitiva de 125 millones de dlares para que la empresa automotriz procediera a reparar un defecto de
fabricacin del automvil Ford Pinto, que tena dos defectos de seguridad pasiva: 1) el depsito de combustible estaba
ubicado detrs del eje trasero, por lo cual cada cierta cantidad de unidades, alguna necesariamente explotaba con
mucha facilidad en caso de colisin; 2) Por otra parte, la carrocera era muy endeble, lo que motivaba que en caso de
colisin el vehculo dejaba atrapados a sus ocupantes a causa del bloqueo de sus puertas.
La informacin que manejaba Ford era la siguiente: si bien el costo de reparacin por cada auto era de U$S 11 dlares,
ello implicaba 137,500 millones de dlares para la reparacin, debido a los ms de doce millones de autos vendidos.
Como el costo de reparacin de los eventuales daos por accidentes sera el costo de demandas por 180 vidas y 180
lesiones por quemadura grave, lo cual insumira slo 49,500 millones de dlares, en funcin de dicha informacin y la
utilizacin del anlisis costo-beneficio, la controvertida decisin empresarial fue de no hacer las modificaciones
necesarias porque le resultaba ms oneroso realizarlas que pagar los costos por los daos.
60
LVAREZ LARRONDO, Federico M. La incorporacin de los daos punitivos al Derecho de Consumo argentino.JA
2008-II-1246 - SJA 28/5/2008
61
19
ZAVALA DE GONZLEZ, Matilde y GONZLEZ ZAVALA, Rodolfo M., "Indemnizacin punitiva", en Bueres, Alberto
J. y Kemelmajer de Carlucci, Ada (dirs.), "Responsabilidad por daos en el tercer milenio", Ed. Abeledo Perrot, Buenos
Aires, 1997, p. 188
20
No me imagino a nuestros virtuosos legisladores tratndole de explicarle a Aristteles -claro que un cierto grado de
coherencia- las virtudes de legislar de esta nueva forma rpida, extorsiva e irreflexiva, frente al virtuoso y lgico sistema
por este propuesto y a la postre adoptado por nuestra constitucin. Deca en su oportunidad que "conviene que las
leyes bien establecidas definan todo cuanto sea posible por si mimas y dejen a los jueces lo menos posible...ya que la
legislacin es el resultado de un largo proceso de reflexin, mientras que las sentencias son momentneas, leyes son
producto de la reflexin..." ARISTOTELES, "Retorica" pag.10.21
LISOPRASWKY. La Ley 2008. A. Pg. 652
22
LISOPRAWSKY , Silvio, DEL SEL, Juan Mara. En "Responsabilidad del "developer" en el fideicomiso inmobiliario"
LA LEY2008-A, 652
63
25
ANA INS ELAS, "Dao Punitivo. derecho y economa", en ARIZA, ARIEL, La reforma al rgimen de Defensa al
Consumidor por Ley 26.361, 1 ed., AbeledoPerrot, Buenos Aires, 2008, p. 156.
27
DIEZ PICAZO y PONCE DE LEON, "Derecho de daos", p. 48 Cit en. LL 2009.747.- b
65
-FARINA, Juan M., Defensa del consumidor y del usuario. Comentario exegtico
de la ley 24.240 con las reformas de la ley 26.361, 4 edicin actualizada y
ampliada, Astrea, Buenos Aires, 2008.
-GREGORINI CLUSELLAS, Eduardo. El consumidor inmobiliario. Su tutela en la
ley 24240 reformada por la ley 26.321". J.A-II. Pag. 50/51
-ITURRASPE, Jorge Mosset, Del micro al macro sistema y viceversa. el dialogo de
las fuentes. Rubinzal-Culzoni. Revista de derecho Privado y Comunitario. 2009-1.
-LISOPRAWSKY, Silvio, DEL SEL, Juan Mara. En "Responsabilidad del
"developer" en el fideicomiso inmobiliario" LA LEY2008-A, 652
-LISOPRASKI, Sergio. "Oferta pblico de fideicomisos "no financieros". LA
LEY2007-D, 911
-LISOPRASKY, Silvio. "Fideicomiso, ni ngel ni demonio". LA LEY 2007-E, 1038
-LISOPRAWSKI, Silvio V. - KIPER, Claudio M "TRATADO DE FIDEICOMISO"
LexisNexis - Depalma. 2003
-LISOPRAWSKY, Silvio. MATORELL, Ernesto E "Crisis de fideicomisos
emblemticos. Nuevos alcances de la responsabilidad del fiduciario" Publicado en:
LA LEY 2009-C
-LORENZETTI, Ricardo Lus. Tratado de los contratos. Tomo III. Ed. Rubinzal
Culzoni. Bs. As. 1999
-LOPEZ DE ZAVALIA, Fernando J., Teora de los contratos. Parte general. Ed.
Zabala. Buenos Aires. ao 2003. Tomo I.
-MAQUEZ, Fernando. "Fideicomiso" La Ley .Bs.As. 2008.
-MARQUEZ, Fernando. "Notas sobre el fideicomiso con fines de garanta". JA
2000-IV-1225
-MATORELL, Ernesto E. "Fideicomiso: La imperativa necesidad de reformar la ley
24.441" LA LEY2008-B, 1156.-MOLINA SANDOVAL, Carlos A. La proteccin jurdica del adquirente de unidades
funcionales y el fideicomiso inmobiliario LA LEY2007-E, 1288
-NICOLAU Noem Lidia. "Fundamentos de derecho contractual. Teora general del
contrato". Ed. La Ley.2009. Tomo
-PIAGI, Ana "el derecho comercial y los desafos de la modernizacin" Publicado
en: LA LEY 1997-F
-KIPER, Claudio, LISOPRAWSKY, Silvio. "Obligaciones y responsabilidad del
fiduciario". Depalma. Bs. As. 1999.
-KIPER Claudio y LISOPRAWSKI Silvio Vctor "Fideicomiso, dominio fiduciario y
securitizacin", de, Buenos Aires, Depalma, 1995,
-ROSSI, Jorge Oscar, en "La reforma al rgimen del consumidor por ley 26.361".
Ed. Abeledo Perrot. Bs. As. 2008.
-URRETS ZABALIA, Pedro. "Responsabilidad civil del fiduciario" Ed. Rubinzal
Culzoni. 2002
-ROSSI, Jorge Oscar, en "La reforma al rgimen del consumidor por ley 26.361".
Ed. Abeledo Perrot. Bs. As. 2008.
-ZAVALA DE GONZLEZ, Matilde y GONZLEZ ZAVALA, Rodolfo M.,
"Indemnizacin punitiva", en Bueres, Alberto J. y Kemelmajer de Carlucci, Ada
66
junio de 2011
www.saij.jus.gov.ar
Id Infojus: DACF110030
I.- Aspectos generales:
a.- Introito: En un lineamiento similar a nuestra orientacin codificadora fincada en
un sistema de neto corte continental europeo, y con profundas races romanistas,
encontramos los primeros orgenes de esta figura en la antigua roma y por
extensin en todo el resto del imperio.
As la "fiducia" o confianza 28 tena efectiva aplicacin para la concertacin de
determinados negocios o encargos dentro del marco de la vida civil, y en ciertas
relaciones entre los ciudadanos y sus familias siempre con base en la buena fe. En
ese orden social se presentaba principalmente bajo dos formas, la fiducia cum
creditote contacta (otorgamiento al acreedor de una garanta real) y la fiducia cum
amico contracta (transmisin de dominio de un bien a un tercero amigo para que lo
administre y luego lo revierta al dueo originario) 29.- Tales figuras, como se podr
observar en el desarrollo del presente trabajo, se traducen contemporneamente
en lo que conocemos como fideicomiso de garanta y de administracin, y bajo las
cuales se desarrollan la gran inmensidad de emprendimientos inmobiliarios.
Otras formas 30 de manifestacin de esta expresin fiduciaria, se dio en el derecho
Romano y como origen principal de la misma se le suele atribuir al Derecho
Sucesorio, 31 all se la utiliz para ejecutar actos prohibidos o revestidos de
formalidades costosas; tuvo tambin algn desarrollo en el mbito familiar, este
ltimo denominado fideicommissum, convocado para la proteccin de menores,
dementes, ancianos, inhabilitados, inexpertos, quienes transfieren su patrimonio a
un fiduciario para su Administracin.
28
"fiduciario" proviene del latn: "fiducia", que se traduce como "confianza", y que "fideicomiso" proviene tambin del
latn: "fideicommissum" (de "fides", fe, y "commissus", confiado). Segn el Diccionario enciclopdico hispanoamericano. Tal como lo ensean Kipper y Lisopraski en su libro "el fideicomiso".
29
LASCALA, Jorge Hugo. "Practica del Fideicomiso". Ed. Astrea. Bs as. 2005. pg. 1/3.30
En el dictamen de la minora, del Proyecto de Ley, se atribuye, por algunos, el origen de los fideicomisos a los
derechos griego y egipcio, y luego trasmitido al derecho romano por los dos anteriores.
31
LORENZETTI, Ricardo Lus. Tratado de los contratos. Tomo III. Ed. Rubinzal Culzoni. Bs. As. 1999. Pg. 294.
67
LISOPRAWSKI, Silvio V. - KIPER, Claudio M "TRATADO DE FIDEICOMISO" LexisNexis - Depalma. 2003. Negocios
Fiduciarios. Pg. 4
33
MARTORELL, Ernesto Eduardo: "Prlogo" a la obra "Fideicomiso, dominio fiduciario y securitizacin", de Claudio
Kiper y Silvio Vctor Lisoprawski, Buenos Aires, Depalma, 1995, 1ra. Edicin, p. IX y sigtes.
34
TINTI, Guillermo "El fideicomiso. Su regulacin en el derecho Nacional Argentino". Academia Nacional de Derecho.
Concurso de Monografas. Ao 1996.68
Diario de Sesiones 17 de noviembre de 1994. Pg. Reunin 34. Ley 24441. Pg. 3777 y ss, Segn el informe, el
fideicomiso tambin ha sido objeto de leyes especiales en muchos pases de Latinoamrica, Colombia, Chile,
Venezuela, Mxico, El salvador. Panam, Per y Puerto Rico se ha ocupado del instituto.
La experiencia interesante es la del Cdigo de Qubec en el cual la fiducia fue introducida en 1879, suscitando dudas
sobre la naturaleza jurdica. La comisin reviso del Cdigo Civil entendi que deba clarificar definitivamente la
cuestin, para lo cual entre las dos posibilidades: constituir al fiduciario en propietario o bien erigir al patrimonio
fiduciario en un patrimonio de afectacin, opt por la segunda alternativa. As el texto votado por la Asamblea nacional
prev en su artculo 1301 que el patrimonio fiduciario es un patrimonio autnomo distinto del constituyente, del
fiduciario y del beneficiario, y sobre el cual ninguno de estos tiene derecho real. La institucin del fideicomiso como
patrimonio de afectacin tambin esta contemplado en el proyecto de ley Francs de fiducia.
En nuestro derecho esta forma de considerar el fideicomiso tambin reconoce antecedentes en nuestro pas en el
proyecto de ley del senador Velsquez, y en el proyecto de ley elaborado por los notarios delegados por Tucumn en la
XX Jornada Notarial Argentina, bajo la conduccin del ex diputado Fernando Lpez de Zabala, el que se destaca en
sus fundamentos que el objetivo del proyecto es incorporar lo bsico del trust anglosajn.
37
MARQUEZ, Fernando, "La incorporacin del fideicomiso a las legislaciones uruguayas y argentinas. El modelo legal
elegido" Publicado en Revista Crtica de Derecho Privado, N 3, Ao 2006, Montevideo, Uruguay, 2006.
69
carta magna (art. 14 [2] bis), -deber claramente incumplido por nuestra clase
dirigente evidenciado en la constante omisin de medidas dirigidas en ese sentidosino como un verdadero cumplimiento de la manda constitucional ya que la misma
trato fundamentalmente de satisfacer esa necesidad constitucional. Basta solo
advertir que la misma nace intitulada "financiamiento de la vivienda y la
construccin".
Los antecedentes parlamentarios nos brindan el verdadero espritu de la ley. El
diputado 38 que tuvo la oportunidad de informar el despacho de la mayora, que
luego se transformara en la ley, deca se trata de un nuevo instrumento de
fundamental importancia para el ingreso de capitales. Los objetivos de la ley se
asientan sobre pilares bsicos que comprenden un adecuado marco jurdico que
posibilite la organizacin del crdito hipotecario, fundamentalmente mediante la
utilizacin de figuras que den el mximo de garantas a los inversores, tanto
nacionales como extranjeros.
As, de acuerdo con dicho mensaje, los objetivos de la sancin de dicha normativa
se enderezan a proporcionar instrumentos legales comunes capaces de facilitar la
inversin sectorial en vivienda para compra, venta o locacin, canalizar el ahorro
de la comunidad hacia ese sector, facilitar el acceso a prestamos de largo plazo
para la construccin o compra de vivienda, fomentando y reduciendo los costos de
la construccin misma como as tambin de las transacciones inmobiliarias.
Si bien esta ley incorpora esta substancial figura jurdica, lo cierto en que conforme
al creciente dficit habitacional que vivimos en al actualidad fcilmente se podra
colegir que tal normativa no ha cumplido con su objetivo, pero si otros y de gran
importancia como lo es la utilizacin que de ella se hace para encauzar gran parte
del movimiento econmico del pas a travs de los negocios jurdicos que
instrumenta.
Las causas seguramente no son jurdicas sino netamente econmicas financieras,
pues la crisis financiera del ao 2001 dio lugar al boom inmobiliario, pero asociado
netamente con la construccin para el segmento ABC1. Es decir, si bien se utilizo
esta herramienta jurdica como estructura para los negocios inmobiliarios de esa
ndole, los mimos no sirvieron para satisfacer necesidades de vivienda sino, ms
que nada, para especular. Es decir, alojar capitales que antes se valorizaban en el
circuito financiero. Implantando mayoritariamente grandes desarrollos inmobiliarios
utilizados como inversin. Por otro lado paso el ladrillo a ser visto como una de las
mejores alternativas de refugio contra la inflacin - Al respecto se ha dicho que uno
de los negocios fiduciarios que se ha generalizado en la prctica empresaria es el
fideicomiso inmobiliario o de construccin, que se debe al crecimiento de la
38
MOLINA SANDOVAL, Carlos A. La proteccin jurdica del adquirente de unidades funcionales y el fideicomiso
inmobiliario LA LEY2007-E, 1288.
40
La que sin duda fue objeto de duras crticas. Se transcribe parcialmente una de ellas, que sintetiza el pensamiento
de algunos autores y particularmente se sintetiza con esta frase "Yo hubiera sido una mujer pura, si no fuese por mi
cuerpo" (Catalina de Rusia), para luego explicar "En el trance de "apuntalar" a una ley que resulta defectuosa - como
hemos visto con detalle de numerosos defectos escogidos "al toque" sobre el infinito universo de los que padece- hay
quienes dicen que no debe confundirse la fiducia pura con la impura, efectuando una dicotoma entre el "negocio
fiduciario puro" - obviamente existente en el "topos uranos" platnico- y el negocio fiduciario "impurificado", que sera el
maltratado por el legislador del '95 en la deficiente ley 24.441". Ver. MATORELL, Ernesto E. "Fideicomiso: La
imperativa necesidad de reformar la ley 24.441" LA LEY2008-B, 1156.41
Debemos remarcar que tambin ha motivado ello, -no solo la figura jurdica en cuanto a las garantas que otorga-,
sino sus aspectos impositivos, que transitan desde el impuesto de sellos, a la transferencia de inmuebles, impuesto a
las ganancias, rgimen de ganancia mnima presunta, IVA, etc. y que variaran dependiendo la posicin que asuma
cada parte Vg. Transferencia a ttulo gratuito del terreno de un fiduciante al fideicomiso de administracin inmobiliario, y
que luego ocupara el lugar de beneficiario de algunas unidades del Ph, o la transferencia a ttulo oneroso de un tercero
fiduciante, etc. Los cuales, pese a su gran relevancia, no son desarrollados por exorbitar el marco del presente trabajo42
MAQUEZ, Fernando. "Fideicomiso" La Ley .Bs.As. 2008. Pg. 28.
71
43
44
45
48
GOMEZ DE LA LASTRA Manuel C, CNCiv., sala G, en autos "Ortiz, Pablo D. c. TGR Hipotecaria SA", JA
24/01/2007.49
CLUSELLAS, Eduardo G. y ORMAECHEA, Carolina, "Contratos con garanta fiduciaria", Abaco, Buenos Aires, 2003,
ps. 175/177.50
Ob. Cit Ant.
74
51
DE HOZ, Marcelo "Aspectos contractuales e impositivos del fideicomiso inmobiliario" LA LEY 11/09/2009, pg.1
75
52
En el Libro Tercero De los derechos reales Ttulo VII Del dominio imperfecto, prescriben los arts. 2661 y 2662 el
"Dominio imperfecto es el derecho real revocable o fiduciario de una sola persona sobre una cosa propia, mueble o
inmueble, o el reservado por el dueo perfecto de una cosa que enajena solamente su dominio til" y luego "Dominio
fiduciario es el que se adquiere en un fideicomiso singular, subordinado a durar solamente hasta el cumplimiento de
una condicin resolutiva, o hasta el vencimiento de una plazo resolutivo, para el efecto de restituir la cosa a un tercero.
Este dominio imperfecto se caracteriza por no gozar de los requisitos del dominio perfecto que es: Absoluto, Perpetuo,
Exclusivo e irrevocable.
53
MARQUEZ...Fideicomiso...Ob. Cit. Pg. 6. Las notas aclaratorias utilizadas entre guiones me pertenecen.76
operatoria de que trate cada caso. As, se requiere distinta competencia personal y
dedicacin segn el giro. No es lo mismo ser fiduciario de un emprendimiento
inmobiliario de millones de dlares, con varias torres de edificios, ubicados en un
complejo cerrado donde tambin se comercializa y desarrolla un country -con todo
lo que implica, desde el tendido de los servicios de agua, luz etc, hasta la
determinacin del marco normativo que regir la vida del complejo-, que el
fiduciario testamentario de una sola casa de escaso valor, cuyo objeto es la
locacin de la misma. En el caso, cada giro requiere especiales conocimientos profesionalizacin, y por supuesto una diversa complejidad de estructura para
llevar adelante la misma, y tiempo de dedicacin.
b.- Responsabilidad externa.
Esta refiere a las derivaciones jurdicas que pueda ocasionarle la relacin asumida
como motivo u ocasin de sus funciones en el contrato de fideicomisos, o por los
bienes fideicomitidos frente a terceros, con los cuales contrata o sobre quienes le
pesa el deber genrico de no daar.
El lmite de esta responsabilidad se encuentra regulada en la ley 24.441, al
establecer que : "...los bienes fideicomitidos quedarn exentos de la accin
singular o colectiva de los acreedores del fiduciario" (art. 15), y por otro lado
establece que "...los bienes del fiduciario no respondern por las obligaciones
contradas en la ejecucin del fideicomiso, las que slo sern satisfechas con los
bienes fideicomitidos" (art. 16).
Esta limitacin, que se traduce en los bienes fideicomitidos -los cuales no pueden
ser agredidos por los otros acreedores del fiduciario derivados de crditos extraos
al vnculo resultante de la ejecucin del fideicomiso-, desaparece frente a los
acreedores del fideicomiso por las obligaciones que contraiga contractual o
extracontractualmente con terceros con motivo de la "ejecucin" del mismo.
Aqu tambin se requiere la diligencia del buen hombre de negocios, y deber
responder en caso de no llevar a cabo ese parmetro de conducta frente a
terceros con el patrimonio fideicomitidos, sin perjuicio de responder internamente
por los perjuicios causados al fideicomitente, o beneficiario, con sus propios
bienes. En otros trminos por el cumplimiento de las obligaciones con terceros solo
el patrimonio especial responde. Distinta es la situacin de que los terceros no
sepan por habrselos ocultado el fiduciario que contrata en ese carcter -de
fiduciario-, cabe entender que lo hace para s y en inters propio, comprometiendo
su patrimonio personal, siempre y cuando con quienes contrate hayan sido de
buena fe, esto es, no hayan podido saber de la existencia del fideicomiso y que la
contratacin era en beneficio de este. 56 Respecto de la forma en que debe
vincularse con terceros, al resultar como vimos protegido el patrimonio del
56
KIPER, Claudio, LISOPRAWSKY, Silvio. "Obligaciones y responsabilidad del fiduciario". Depalma. Bs. As. 1999.
Pg. 144 y anteriores.
78
Puede suceder tambin que el negocio fiduciario sea ms sencillo y solo consista en un loteo de tierras en un radio
urbano, en cuyo caso seguramente las tareas sern distintas y requerirn menor especialidad. En tal caso la figura no
arroja a priori mayor dificultad y quizs si se efecta un buen contrato de constitucin de fideicomiso delimitando en
forma certera las responsabilidades, la ley funcione de manera adecuada. Parafraseando a CARREGAL "Dejemos en
paz lo que funciona bien" , Mario: "Fideicomiso de garanta. Lcito y necesario", LA LEY, 2000-E, 948
59
El Outsourcing, es originado en La feroz competencia en toda el rea de negocios y la velocidad de los cambios
tecnolgicos, plantearon la conveniencia de la tercerizacin ("outsourcing"), para desarrollar determinadas funciones o
actividades fuera de la empresa. Con fundamento en el postulado de que no existen organizaciones verdaderamente
productivas en todas sus actividades, se busca la especializacin a travs de terceros capaces de ejecutar ciertas
actividades mejor que la propia empresa, con el objeto de que sta se centre en su actividad especfica ("core
competence"), para as obtener un mejor resultado integral. (ver. Piaggi, Ana "el derecho comercial y los desafos de la
modernizacin" Publicado en: LA LEY 1997-F, 1406)
60
Ver entre otros los ofrecimientos del servicios fiduciarios en www.pwc.com/uy/es/real-estate
61
GOLDENBERG, Alicia y GOMEZ DE LA LASTRA, Manuel, "Fondos de inversin directa y fideicomiso (Una va
productiva para el crecimiento)", Editorial La Ley (2003). Pg. 78 Ver tambin en La Ley 2008. A 652)
63
CARREGAL, Mario: "El fideicomiso: su aplicacin desde la sancin de la ley 24.441", LA LEY, 2007-B, 1165.
64
Diario de Sesiones 17 de noviembre de 1994. Pg. Reunin 34. Ley 24441.Palabras del diputado Pernacetti. Pg.
3778 y ss.80
convencin fiduciaria establecida entre los dos sujetos", y otra cuestin distinta es
como se ha regulado. Afirma Lisoprasky "El instituto en s, no es ni ms ni menos
"peligroso" que otros previstos en nuestro ordenamiento. Se trata de poner en
evidencia que la crtica a veces confunde el objetivo. Apunta a la ley y a la vez
descalifica la figura, cuando slo lo primero debera ser el objeto del ataque". 65
VI. CONCLUSION El fideicomiso como instrumento jurdico del negocio fiduciario
inmobiliario, se esta trasformando en la herramienta fundamental para este tipo de
operaciones, permitiendo mltiples facetas de negociacin y desarrollo desde
pequeos a grandes desarrollos inmobiliarios debido a la optima versatilidad de la
figura y por otro lado la mayor garanta que otorga el patrimonio separado a las
partes del negocio. Pese a ello como vimos tambin puede el fiduciario utilizar las
facultades contractuales con otras finalidades y as perjudicar a las otras partes del
contrato.
Es sin dudas este contrato de suma utilidad para encauzar los modernos contratos,
donde se pueden auscultar complejas situaciones tcnicas y financieras de amplia
complejidad, la llamada tecno economa globalizada.
As por otro lado un marco importante de contencin deben tener quienes pueden
ser victima de los defectos o fallas que pueda padecer tal figura contractual,
particularmente por los roles de los actores intervinientes -fiduciario, developers,
constructores, etc- y la particular forma de transmisin del dominio, aspecto que
seguramente futuras modificaciones a la legislacin vigente se ocuparan de su
efectiva proteccin.-
65
LISOPRASKY, Silvio. "Fideicomiso, ni ngel ni demonio". LA LEY 2007-E, 1038 Se puede ver en un muy logrado
articulo en tema en profundidad, tambin se recomienda la lectura de la nota periodstica que motivara la publicacin
del artculo citado, denominado "fideicomisos ngel o demonio?, escrita por SALAZAR, Bernardina en diario, El
Cronista; Abogados Corporate, Buenos Aires, 25/06/2007, ps. I, II y III. Publicado en: LA LEY 2007-E, 1038.
81
ENCICLOPEDIA INFOJUS
diciembre de 2008
www.saij.jus.gov.ar
Id Infojus: DACC080121
ANTECEDENTES.
El Fideicomiso (F) tiene su origen en el derecho romano. El pacto fiducia, consista
bsicamente en un contrato de encomienda, por el cual el pater familia, ante la
necesidad de ir a la guerra dejaba sus bienes a una persona de su confianza, para
que los administrara a favor de sus herederos -quienes provisoriamente no podan
hacerlo- y as asegurarse que ellos los aprovecharan -llegado el momentoconforme su voluntad. Este contrato tena un fuerte contenido de confianza mutua
entre las partes. En nuestra legislacin el F ya aparece regulado en el texto original
del Cdigo Civil que prev la propiedad fiduciaria como una forma imperfecta de
dominio.
El art. 2661 [5] dice que "dominio imperfecto es el derecho real revocable o
fiduciario de una sola persona sobre una cosa propia, mueble o inmueble ..."
Cuando el dominio es menos pleno las facultades del dueo estn disminuidas.
Ello puede ocurrir de diversas maneras as es que existen 3 casos de dominio
imperfecto:
a) dominio revocable
b) dominio fiduciario
c) dominio gravado por lo cual la propiedad fiduciaria es por su naturaleza menos
plena y transitoria. Sin embargo las disposiciones del cdigo fueron insuficientes a
los fines de transformar el contrato de F en una herramienta til para los negocios,
lo cual hizo necesario una norma que precisara ms en detalle todos los aspectos
del F. As fue que en enero de 1995 se sancion la 24441 [6], que modific sus
alcances y expresamente dispuso que habr fideicomiso cuando una persona
(fiduciante) transmita la propiedad fiduciaria de bienes determinados a otra
(fiduciario), quien se obliga a ejercerla en beneficio de quien se designe en el
contrato (beneficiario) y a transmitirlo al cumplimiento de un plazo o condicin al
fiduciante, al beneficiario o al fideicomisario. La norma si bien toma el modelo de la
institucin romana le da una regulacin diferente ms parecida al derecho
anglosajn, derecho que se ocup de la revitalizacin del F y su insercin en el
mundo de los negocios. .
82
83
PARTES INTERVINIENTES.
Quines son las personas que componen el Fideicomiso? Principalmente 3:
1) El constituyente, fideicomitente o fiduciante, que es quien crea el fideicomiso
2) El fiduciario o fideicomitido que ser el titular del dominio fiduciario, es decir
quien recibe la cosa del constituyente a fin de transmitirla, en su caso a un tercero.
Su derecho es interino, hasta que el plazo o condicin se cumpla
3) El fideicomisario que es el tercero a quien la cosa debe entregarse en propiedad
en ltima instancia.
Sin embargo en el sistema actual de la ley 24.441 aparece como novedad un
sujeto ms ya que hay un posible desdoblamiento de beneficiaros. Aparece en
consecuencia: El beneficiario en ventaja del cual se administran los bienes
fideicomitdos durante el desarrollo del contrato y mientras el fideicomiso se est
consumando a la espera del cumplimiento de la condicin o plazo, el propio
fiduciante puede llegar a ser beneficiario. La diferencia entre el beneficiario y el
fideicomisario radica en que el primero, recibe la utilidad de la gestin propia del
fiduciario en ejercicio de las facultades que le confiere el pacto de fiducia mientras
que el segundo es el destinatario final de los bienes residuales del fideicomiso.
REQUISITOS DE PERFECCIONAMIENTO EN CASO DE BIENES
REGISTRABLES.
El acto de creacin del F se perfecciona mediante instrumento privado pero en
materia de bienes registrables el F slo ser oponible a terceros en la medida que
dicho contrato sea inscripto en el Registro respectivo, para lo cual es necesario
que conste en algn documento inscribible. Dicha inscripcin deber contener los
elementos necesarios que permitan individualizar sus limitaciones especialmente
lo referido al plazo o condicin al que queda sometido esa propiedad. Es
importante tambin que el titular original se desprenda del dominio que era pleno el
cual pasa al fiduciario pero como imperfecto.
PATRIMONIO DE AFECTACIN Es relevante aclarar que con los bienes
fideicomitidos se constituye un patrimonio de afectacin, pues de acuerdo con
los artculos 14, 15 y 16 [7] de la ley 24.441, los indicados bienes son un
patrimonio separado tanto del perteneciente al fiduciario como al del fiduciante. Es
decir que los bienes no pasan simplemente al patrimonio del fiduciario, sino que
constituyen un patrimonio diverso del de ste. El patrimonio separado es prenda
comn de los acreedores del F.
84
85
86
negocios" (art. 6). Pero en mrito del art. 16 de la ley, los bienes del fiduciario no
responden por las obligaciones contradas en la ejecucin del fideicomiso. La
institucin del Fideicomiso crea un patrimonio separado de cualquier otro, que
debe ser administrado y dispuesto por el fiduciario conforme a los trminos del
contrato y que en esta ejecucin del mandato o del fideicomiso slo est
comprometido el patrimonio fideicomitido y no el del fiduciante (salvo dolo) o
fiduciario salvo su responsabilidad por no cumplir con el F ALGUNOS ASPECTOS
DE LA LEY 24.441 SUSCEPTIBLES DE MEJORA.
A continuacin enumeraremos algunos factores que de ser considerados por la
ley, ayudaran a evitar que el F provoque consecuencias daosas a terceros.
Algunos de ellos son los siguientes: * Prever la inscripcin del contrato de F para
darle publicidad a terceros, ante un registro creado a tales efectos (al igual que la
inscripcin de un contrato de formacin de una U.T.E. ante la Inspeccin General
de Justicia).
* La ley no estipula ningn tipo de publicidad al momento de concretarse la
transmisin de la propiedad fiduciaria. Por ello para seguridad de los acreedores
sera conveniente que la norma previera, a semejanza de la transferencia de un
fondo de comercio, un sistema que le permita a los posibles acreedores y terceros
tomar conocimiento de la transmisin, a los fines de hacer valer sus posibles
derechos.
* Imponer como requisito la figura de un Fiduciario Profesional. Con esto nos
referimos a una persona fsica o jurdica que haga de la actividad de fiduciario, su
profesin. Ello porque la ley impone al fiduciario el cumplimiento de obligaciones
propias del F las cuales incluyen no slo las propias de la administracin en s del
F sino tambin obligaciones contables, tributarias, fiscales, laborales que
normalmente se vuelven demasiado complejas para quienes no hacen de ello su
actividad habitual.
* Pero un aspecto ms importante tal vez sera exigirle a todo fiduciario (al igual
que para el fiduciario financiero y los fiduciarios que se ofrecen al pblico) su
inscripcin ante un Registro, en especial para quienes hacen del F un acto de
comercio, y que su inscripcin requiera la acreditacin de un capital mnimo.
* Prever una instancia judicial para el caso de insolvencia del patrimonio
fideicomitido. La ley dispone que el F no podr ser declarado en quiebra y por eso
ante su insolvencia deber el fiduciario cancelar la deuda de los acreedores
siguiendo los parmetros establecidos en la ley de quiebras. Sin embargo la norma
no prev la hiptesis en que los acreedores se sientan disconformes con el trato y
tipo de privilegio conferido y quieran reclamar judicialmente a lo cual nadie podra
impedirles su accionar con el fundamento que ello no fue tratado por la ley.
91
En el mbito del derecho tributario, la ley sin ningn prurito, subjetiviza aquello que
esencialmente no es una persona jurdica sino un patrimonio separado y lo torna
responsable del pago de ciertos impuestos como fundamentalmente el impuesto a
las ganancias. La razn de ser de esta subjetivizacin radica en que en el mbito
del derecho tributario campea el principio de la realidad econmica. En
consecuencia, la norma tributaria no se detiene a analizar los lineamientos de la
ley de F, y simplemente verifica que en la realidad, el F tiene notas tpicas de un
sujeto de derecho porque tiene rasgos de personalidad.
Patrimonio de afectacin y personalidad jurdica Atento a los trminos de la ley
24.441, el Fideicomiso no es una persona jurdica sino solamente un patrimonio de
afectacin, por lo tanto si la ley no lo reconoce como un sujeto susceptible de
adquirir derechos y contraer obligaciones ste no puede ser considerado una
persona. Pero ello no obsta a reconocer en las personas jurdicas la existencia de
un elemento material subyacente al elemento formal. Este elemento material esta
compuesto por un grupo de personas, organizado para la consecucin de un fin o
una organizacin patrimonial a ese efecto. Es dentro de este elemento que
encontramos en primer lugar una finalidad propia de la persona jurdica es decir su
objeto, un patrimonio propio y rganos que actan en su nombre. El elemento
formal consiste en la aptitud para adquirir derechos y contraer obligaciones que en
las personas jurdicas esta constituida por el reconocimiento de la personalidad
jurdica del ente colectivo.
El Fideicomiso si bien carece del segundo elemento en virtud de una disposicin
legal, lo cierto es que posee atributos de personalidad que justifican su analoga
con el concepto de personalidad jurdica, dado que: * en ambos existe un
patrimonio separado del de sus otorgantes.
* ambos tienen una finalidad propia y autnoma. El Fideicomiso se ejecuta en
beneficio de un tercero y los bienes fideicomitidos tienen su propia finalidad,
distinta del fiduciante y diferente del fiduciario.
* tanto la persona jurdica como el patrimonio fideicomitido tienen un sujeto que
acta en cumplimiento de la finalidad propia. En el primer caso ser la comisin
directiva, directorio, gerencia y en el segundo el fiduciario. Tanto el fiduciario como
el administrador de la sociedad en cumplimiento de su funcin contraen
obligaciones, celebran contratos, suscriben documentos pero no responden con
sus bienes por esas obligaciones sino con los bienes que integran el patrimonio y
ambos responden personalmente si su comportamiento se aleja del estndar del
"bueno hombre de negocios" De manera pues que el patrimonio fideicomitido goza
de una personalidad, patrimonio y responsabilidad diferente de las del fiduciante y
fiduciario que lo hace pasible de ser considerado una persona jurdica y ello
porque bsicamente nuestra legislacin haba descartado la idea de un patrimonio
de afectacin, sin un sujeto al frente.
93
* un plazo de duracin (previsto por las partes y en caso de omisin, fijado por la
ley) * requiere de una contabilidad diferenciada, si bien el fiduciario administra, su
poder puede ser revocado por el fiduciante quien debe adems dar expresa
conformidad al fiduciario para realizar aquellos actos que excedan de los
necesarios para el cumplimiento del fideicomiso.
En definitiva, slo cuando el contrato de fideicomiso tenga un aspecto negocial
propio de una figura societaria, estaremos en condiciones de evaluar la posible
aplicacin de la teora del disregard.
CASOS CONCRETOS:
1) Se aparta de la consecucin de los fines especficos.
El Dr. Isaac Halpern consideraba que la personalidad jurdica es un remedio
tcnico utilizado en el derecho siempre y cuando se tienda a la consecucin de los
fines lcitos perseguidos y previstos por la ley. Cuando se produce una
apartamiento, es posible prescindir de tal personalidad porque no puede
emplearse con fines ilcitos. Ahora bien el Fideicomiso no ostenta personalidad
jurdica, pero s requiere en su constitucin la expresin clara y detallada de los
fines de su creacin. De modo tal que un apartamiento de estos fines hara posible
la aplicacin de la teora del disregard.
2) Infracapitalizacin: En los casos que el fiduciario no pudiera cumplir con el
objeto del fideicomiso por haberse agotado el patrimonio fideicomitido en casos en
que ste adems fuese notoriamente escaso con relacin al fin propuesto en el
fideicomiso y el fiduciante se negara a aportar mayores recursos.
3) Inters personal del fiduciante.
Debe existir una falta total de todo inters del fiduciante, por los bienes que ha de
distribuir a los beneficiarios llegado el momento. La autonoma del patrimonio
fideicomitido tiene su razn de ser, en que el fiduciario no tiene en l ninguna
participacin ni inters. Estas posibles vinculaciones societarias entre fiduciante y
fiduciario pueden tambin dar lugar a la aplicacin del disregard en lo casos en
que el fiduciario sea una sociedad controlada por la sociedad fiduciante.
4) Elusin de un pronunciamiento judicial: Podra suceder que una sociedad
demandada en un juicio laboral, decidiera insolventarse a fin de evadir el
cumplimiento de una sentencia. En ese caso se configura un abuso de la figura del
fideicomiso para obtener una finalidad contraria al ordenamiento jurdico.
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ENCICLOPEDIA INFOJUS
27 de junio de 2006
ECOTRIBUTARIA - Boletn de actualidad econmica y fiscal
Id Infojus: DACF060067
La ley 24.441 [1] estableci especficamente el tratamiento a darle a la antigua
figura del fideicomiso. Poco despus, mediante el decreto 780/95 [2] se reglament
esta particular forma de afectar una porcin de un patrimonio a una finalidad
determinada. A partir de ese ao, poco a poco esta modalidad ha ido adquiriendo
relevancia y actualmente se ha vuelto bastante usual, sobre todo en materia
financiera.
Nos proponemos en este trabajo hacer algunas consideraciones con relacin al
tratamiento impositivo de esta figura legal, fundamentalmente en lo que se refiere a
la condicin o no de sujeto de los distintos impuestos .
En principio, daremos una somera explicacin de cmo funciona un fideicomiso,
porque estimamos que es de gran inters. Ante todo, diremos que si bien se usa
mucho la forma financiera de estos contratos, tambin pueden constituirse
fideicomisos no financieros, cuyo uso no est tan difundido, tal vez por ser poco
conocidos.
En esencia esta figura permite separar parte de cualquier patrimonio con
finalidades especficas de muy diversa ndole, es decir que se trata de un contrato
con fines determinados. Es posible desde ceder un inmueble para alquilarlo y
obtener una renta que permita que un hijo costee sus estudios, hasta transmitir
bienes para la constitucin de una empresa que asegure la continuidad de un
proyecto de gran envergadura.
Entonces: un propietario de ciertos bienes (inmuebles, crditos, acciones, etc),
transmite los mismos a otra persona (fsica o jurdica) con el objeto de que
desarrolle una actividad que conduzca a alcanzar los fines por los cuales se
constituye. Los resultados estn destinados al beneficiario que se designe en el
contrato, y una vez cumplida la razn de ser del fideicomiso, los bienes pasarn a
poder de quien sea designado en el contrato.
De tal manera que tenemos el fiduciante (cedente), el fiduciario (receptor de los
bienes que se ocupa de cumplir la finalidad que se establezca), el beneficiario y
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Contador pblico.
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ENCICLOPEDIA INFOJUS
2006
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Id Infojus: DACC060094
Se propone que estas Jornadas declaren:
1.- Que el fideicomiso es un instrumento vlido y eficaz para canalizar negocios de
garantas.
2.- Que el fideicomiso en garanta cuenta con su propia ley regulatoria, la que
excluye al patrimonio fideicomitido de las acciones singulares y colectivas que
pueden promoverse contra el fiduciante, el fiduciario o el beneficiario.
3.- Que ante el concurso del fiduciante, el patrimonio fideicomitido en garanta se
encuentra excluido del proceso concursal.
4.- Que el acreedor garantizado con el patrimonio fideicomitido no tiene obligacin
de verificar su crdito en el concurso del fiduciario para ejercer su derecho de
garanta.
5.- Que el juez del concurso no puede disponer medidas cautelares sobre los
bienes fideicomitidos, en los trminos del art. 24 L.C.Q [1]., pues se trata de bienes
ajenos al fiduciante-concursado, no incluidos en la masa patrimonial bajo su
jurisdiccin.
6.- Que a los fines de determinar la onerosidad o gratuidad de la trasmisin
fiduciaria con el objeto de determinar la procedencia de acciones de ineficacia,
deber considerarse el negocio al que accede el fideicomiso como garanta, ms
all de que el fiduciario cumpla su encargo en forma onerosa o gratuita.
I.- Introduccin.
Pocos instrumentos jurdicos introducidos en la legislacin argentina sin una
prctica comercial previa han tenido el xito del fideicomiso.
67
Abogado. Profesor Derecho Privado, UCC, UES21. Ciudad de Crdoba. (1) La ponencia resume las posiciones del
autor expuestas en el trabajo, del mismo nombre, publicado en Revista de Derecho Privado y Comunitario, 2003-1,
Rubinzal-Culzoni, Bs.As., 2003, pg. 129.
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2006
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Id Infojus: DASC060101
1) El Fideicomiso Ordinario Con el objeto de una mejor exposicin, desarrollo y
compresin del tema elegido, consideramos necesario comenzar con una breve
resea del concepto de fideicomiso ordinario, y sus lineamientos previstos tanto
por la ley 24.441 [1] como por el Cdigo Civil, para luego entrar en el anlisis de
este tipo de fideicomiso especial, como lo es el de garanta, con todo la
problemtica que genera ante la ausencia de regulacin legal especfica.
La ley 24.441, en su art. 1 [2] define esta figura de la siguiente manera: "Habr
fideicomiso cuando una persona (fiduciante) transmita la propiedad fiduciaria de
bienes determinados a otra (fiduciario), quin se obliga a ejercerla en beneficio de
quien se designe en el contrato (beneficiario), y a transmitirlo al cumplimiento de
un plazo o condicin al fiduciante, al beneficiario o al fideicomisario".
El fideicomiso como contrato debe reunir los elementos esenciales y particulares,
enunciados por la teora general del contrato. Las partes del contrato son dos:
quien transmite la propiedad de bienes determinados (fiduciante) y quien recibe
esa propiedad (fiduciario) sujeta a un plazo o a una condicin, finalidad tambin
precitada en el contrato. El "beneficiario" no es "parte", sino tercero en el negocio.
Explica la doctrina que los elementos del negocio fiduciario son:
a) La confianza entre fiduciante y fiduciario.
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Abogada - Jefa de Trabajos Prcticos de Derecho Civil III - Facultad de Derecho UNR.
Abogada - Profesora Adjunta Ordinaria de Derecho Civil III - Facultad de Derecho UNR.
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contrato deber individualizar al beneficiario, quien podr ser una persona fsica o
jurdica, que puede o no existir al tiempo del otorgamiento del contrato; en este
ltimo caso, debern constar los datos que permitan su individualizacin futura." El
Fideicomisario NO es parte, sino el destinatario natural de los bienes fideicomitidos
y un beneficiario eventual en el caso de que ningn beneficiario aceptare. En la ley
24.441 solo se menciona como sujeto, pero no se define su rol.
2) Del Fideicomiso de Garanta
2.1) Breve anlisis de los antecedentes histricos.
Como punto de partida, para analizar el fideicomiso de garanta nos referiremos a
sus antecedentes histricos y as en primer lugar nos ocuparemos de la fiducia
cum creditore contracta, que fue la forma ms primitiva del derecho romano de
constituir una garanta real.
Segn relatan los historiadores, consista en el contrato por el cual el deudor
(fiduciante) transmita la propiedad de una cosa al acreedor (fiduciario) en garanta
de la obligacin que los vinculaba, mediante las formas de la mancipatio o de la in
iure cesio, concertndose al mismo tiempo un pacto (pactum fiducie), por el cual el
acreedor se obligaba bajo su palabra (FIDES) a restituir la cosa al deudor cuando
fuera satisfecha la deuda. En cambio, si el deudor no pagaba en trmino se
consolidaba la propiedad en cabeza del acreedor y no quedaba obligado a restituir
suma alguna al deudor, aun cuando su valor excediese el crdito que garantizaba.
Si el acreedor haba sido autorizado por el pacto a vender (pactum de vendendo),
el deudor tena derecho personal a cobrar la diferencia entre el precio de la venta y
el monto de la deuda pagada (superflum).
En un principio se trat de un negocio basado puramente en la confianza (FIDES),
pues el deudor deba confiar exclusivamente en la buena fe de su acreedor, de
quien dependa el cumplimiento de lo pactado, asumiendo el deudor el riesgo de
que la cosa no le fuera retransmitida al cumplir la obligacin.
Debe destacarse que en la fiducia romana el acreedor fiduciario era el propietario
quiritario de la cosa fideicomitida en garanta y esta propiedad la ejerca en
nombre, cuenta e inters propio. Como propietario gozaba de los atributos de su
derecho y se comportaba como tal frente a los terceros.
En realidad la fiducia constitua una slida garanta para el acreedor, pero
resultaba desventajosa para el deudor, quien, privado del uso y goce de la cosa,
quedaba librado exclusivamente a la bona fides del acreedor y sin accin real para
recobrarla cuando la cosa era dispuesta contra su voluntad.
110
117
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
- LORENZETTI, Ricardo "Tratado de los Contratos
- KIPER, Claudio y LISOPRAWSKI, Silvia, "Tratado de Fideicomiso"
- HIGHTON, Elena " El dominio fiduciario y la problemtica de su reflejo registral"
en Revista de Derecho Privado y Comunitario
- PUERTA de CHACON, Alicia "Propiedad fiduciaria en garanta Es posible en el
derecho vigente?" en Revista de Derecho Privado y Comunitario
- CINOLLO, Oscar Agustn "El contrato de Fideicomiso de garanta" en Revista de
Derecho Privado y Comunitario
- PERALTA MARISCAL, Leopoldo, "El negocio fiduciario con fines exclusivos de
garanta como acto jurdico", en Revista de Derecho Privado y Comunitario
- BARREIRA DELFINO, Eduardo "El Fideicomiso de Garanta", Seminario dictado
en la Escuela de Graduados de la Facultad de Derecho de la UNR- VILLEGAS Carlos "Las Garantas del Crdito" T II.
ENCICLOPEDIA INFOJUS
2006
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Id Infojus: DASC060097
PONENCIA - El Fideicomiso de Garanta es un negocio jurdico vlido que
encuadra dentro de las disposiciones de la Ley 24.441 [1] y permite el
otorgamiento entre partes de pactos de fiducia dentro de los lmites de la
convencionalidad del art. 1197 [2] del Cdigo Civil. Por la extensin de sus
posibilidades, conferida por el art. 1 [3]. de la Ley, los pactos de fiducia poseen
causa atpica, siendo vlido el que configure una garanta personal entre fiduciante
- garante y beneficiario - acreedor.
- El negocio fiduciario de garanta asume entidad propia respecto de las garantas
personales justificando su existencia tanto en su tipicidad legal como en la
atipicidad de su causa permitida por la ley y motivada en la amplitud de negocios
jurdicos a los que puede aplicarse la figura general del fideicomiso. No encuadra
dentro de los negocios indirectos sino dentro de los negocios con causa atpica.
- No debe ser considerado como un negocio en contra de la ley pues no est
prohibido por norma legal alguna. Tampoco debe ser encuadrado como negocio en
fraude a la ley, pues prima facie no viola ninguna norma o principio imperativo o de
orden pblico.
70
- No configura un derecho real de garanta sino una garanta personal vlida pues
es un contrato que contiene un pacto de fiducia obligacional tripartito y complejo
entre el fiduciante-garante y el beneficiario-acreedor y luego entre stos y el
fiduciario, cuya causa como fin o intencin de las partes es garantizar una
obligacin principal y preexistente (derecho personal), aunado a la transferencia
del dominio de bienes (derecho real). Esta transferencia es condicin de existencia
de todo fideicomiso y a su vez es efecto del pacto de fiducia.
- En el Fideicomiso de Garanta, el fiduciario siempre debe ser una persona ajena
al fiduciante- garante y al beneficiario-acreedor, no pudiendo en consecuencia
concurrir las figuras de beneficiario-acreedor y fiduciario, pues la Ley 24.441
prohbe al ltimo adquirir para s los bienes fideicomitidos. (art. 7 [4]). El fiduciantedeudor tendr el carcter de fideicomisario, no de beneficiario, a efectos de recibir
los bienes remanentes en caso de ejecucin de la garanta por el Fiduciario o
extincin del fideicomiso por cumplimiento de la obligacin garantizada.
- El acto jurdico del primer tramo del pacto de fiducia entre fiduciante-garante y
beneficiario-acreedor, es otorgado a ttulo oneroso. A los efectos de la accin de
fraude de los acreedores normada en el art. 961 [5] y ss. del Cdigo Civil, no
resultan aplicables los arts. 967 [6] y 970 [7] de dicho cuerpo legal. Tampoco le es
aplicable el concepto de gratuidad del art. 118 [8] inc. 1. de la Ley de quiebras No.
24.522 a los efectos de la accin revocatoria concursal. Es por ello que, salvo
fraude y probada connivencia, el tercer adquirente a ttulo oneroso de los bienes
debe ser considerado de buena fe, siendo su ttulo inatacable por los acreedores
del fiduciante-garante o los del acreedor-beneficiario.
- En el supuesto que el fiduciante-garante contine en posesin del inmueble cuyo
dominio transfiri al fiduciario, es innecesaria la tradicin pues el fiduciante se
convierte en poseedor a nombre de aqul mediante la figura del "constituto
posesorio" (art. 2461 [9] del Cdigo Civil), sugirindose el otorgamiento de un
contrato de depsito que contendr el modo y plazo de entrega del bien por parte
del fiduciante-garante en caso de incumplimiento de la obligacin principal por
parte del deudor.
- El Fideicomiso de Garanta crea un privilegio legal no concursal amparado por
el art. 3876 [10] del Cdigo Civil que surge de la norma de orden pblico del art. 15
[11] de la Ley 24.441.
- El proceso falencial del fiduciante-garante no afecta al Fideicomiso de Garanta.
El acreedor-beneficiario deber verificar su crdito como quirografario en iguales
condiciones que cualquier titular de obligacin garantizada, pero no debe verificar
la garanta privilegiada pues esta surge de un patrimonio separado del patrimonio
del deudor fallido. Por esta ltima razn, la ejecucin de la garanta fiduciaria debe
efectuarse fuera del proceso falencial del fiduciante. Este a su vez, deber declarar
como fideicomisario, su crdito eventual a los bienes remanentes una vez
119
Kiper , Claudio M y. Lisoprawski, Silvio V., "Tratado de Fideicomiso", Ed. Depalma Bs. As. pgs. 463 y siguientes.
Ver la resea jurisprudencial de fallos a favor de la validez del Fideicomiso de Garanta realizada por Hctor Alegra
en "Fideicomiso en Garanta (efecto sobre los crditos garantizados y verificacin en el concurso del Fiduciante)", LL
2004-D-847.
73
Como el Contrato de Fideicomiso slo se perfeccionar con la transferencia de dominio, se recomienda que sta se
realice en el acto de celebracin, ya sea en el mismo instrumento o simultneamente en instrumento separado. (Art. 1 Ley 24.441).
120
Manrique Nieto, Carlos E., "La Fiducia de Garanta", Jurd. Gustavo Ibez, Bogot, 1997 pg. 53 citado por Kiper ,
Claudio M y. Lisoprawski, Silvio V., ob. cit. pg. 468.
121
Betti, Emilio. "Teora General del Negocio Jurdico". Editorial Revista de Derecho privado. Madrid. pg. 5 y ss
Carregal, Mario A. "Fideicomiso de Garanta: lcito y necesario". LL. 2000-E-949.
122
regula esta figura jurdica. Esta falta de tipificacin de la causa no debe llevar a la
conclusin de la inexistencia o ilegitimidad del "pacto de fiducia", cualquiera sea l,
a excepcin, por supuesto, que ste sea violatorio de disposiciones legales. Pero
mientras el mismo corra por los carriles de la negociabilidad entre las partes, la
legitimidad del pacto fiduciario es indiscutible y debe necesariamente ser tenido en
cuenta por el derecho pues "si la ley pretendiera maniatar la realidad mediante
regulaciones paralizantes....sera desbordada por la vida misma. La vida es
creacin...que debe ser fomentada y no reprimida por el derecho". 77 Admitida la
legitimidad del pacto de fiducia por el derecho objetivo al dictarse la Ley 24.441,
debe analizarse el mismo como derecho subjetivo que encuadra dentro de los
derechos personales, pues en el Fideicomiso, "la relacin compleja resulta
normalmente, de la interferencia de un acto de disposicin, por s abstracto, y de
un negocio obligatorio causal que envuelve al mismo tiempo la causa justificativa
del primero". 78 Es por ello que en el Fideicomiso de la Ley 24.441, adems de
exigirse para su tipificacin la existencia del pacto de fiducia obligacional destinado
a regular derechos y obligaciones personales entre las partes, la norma legal
requiere adems una condicin de derecho para su existencia: el acto de
disposicin que implica la transferencia de determinados bienes en propiedad al
fiduciario. Este acto de disposicin de bienes es abstracto y consecuencia del
negocio causal contenido en el pacto de fiducia.
4. NATURALEZA JURDICA.
En cuanto a la naturaleza jurdica de la figura de Fideicomiso respecto de su causa
como fin prctico de las partes otorgantes, se ha sostenido que encuadra en el
concepto de negocios indirectos lcitos, los cuales son "aquellos predispuestos
para la obtencin de un resultado para el cual el ordenamiento positivo no
suministra ningn esquema negocial o bien suministra esquemas inadecuados", 79
producindose en el caso del fideicomiso de garanta, "la utilizacin con fines de
garanta de un negocio cuando su causa -o funcin- tpica no se identifica con tal
finalidad". 80 El negocio indirecto tiene semejanzas con el negocio simulado pues
en ambos casos "se ofrece un uso anormal de la funcin instrumental del
negocio...pero en el negocio simulado...la discrepancia entre el negocio querido y
el visible...representa una verdadera incompatibilidad..y es motivo de que
normalmente...el fin disimulado no se haga visible...por el contrario en el negocio
indirecto, de una manera anloga a la del negocio fiduciario, la discrepancia de la
funcin tpica del negocio asume el carcter de una simple incongruencia de fines
que, aunque distintos, son compatibles entre s". 81 Respecto de tales semejanzas,
se ha dicho que "el negocio fiduciario tiene autonoma conceptual y caractersticas
propias que permiten diferenciarlo del simulado...en el que hay discordancia entre
la voluntad real (oculta) y la declarada (aparente)...lo que no se produce en el
77
78
79
80
Mosset Iturraspe, Jorge, "Negocio fiduciario con fines de garanta", Revista de Derecho Privado y Comunitario No. 2
Garantas, Ed. Rubinzal Culzoni, Santa Fe, pg 41.
81
De Reina Tartiere, Gabriel, "Negocio Indirecto en funcin de Garanta", La Lay 2005-F.
123
Peralta Reyes, Vctor M., "Fraude a la Ley y fraude a los acreedores. La accin revocatoria ordinaria o pauliana", La
Ley 2006-D..
84
Betti, Emilio, ob. cit. pg. 234.
124
fundamentales tres diferencias con la figura del comodato: el fin seguido por las
partes (fiduciario-depositante y fiduciante-depositario) es la guarda y custodia de la
cosa, con independencia de que se autorice el uso de la misma; el depositario
tiene la obligacin de restituir y reconoce la tenencia en inters del depositante, y
adems no slo tiene responsabilidad civil sino tambin penal por la falta de
restitucin. A quienes se preguntan quin es el interesado en este depsito
respondemos que las tres partes: al fiduciante-deudor, que aspira a cumplir su
obligacin garantizada y recuperar la cosa le interesa su conservacin y continuar
usando la cosa; al beneficiario-acreedor le importa que la cosa se conserve y/o
mejore su valor y sea prontamente disponible; al fiduciario le interesa que la cosa
quede custodiada y pueda ser rpidamente recuperada.
El depsito es un contrato conexo con otros. Su fin principal es la guarda o
custodia de la cosa, el depositario tiene la obligacin de restituir la cosa y debe
devolver la misma e idntica cosa . En el depsito regular se deber establecer
expresamente la facultad de uso de la cosa. (art 2208 [17]).
El contrato de depsito es considerado como "real" pues el Cdigo habla de
"entrega" de la cosa" (arts..1141 y 1142 [18]). Especialmente el art. 2190
[19] determina tal carcter juzgndolo no concluido sin la tradicin de la cosa
depositada. Refiere Muoz citando a Baudry-Lacantinerie y Wahl, Colin y Capitant,
Josserand- si ser posible la "traditio brevi manu" en el caso en que el depositario
est ya en posesin de la cosa (la entrega puede ser real o simblica, efectiva o
traditio brevi manu), pero luego manifiesta que en el depsito regular no se tradita
la cosa sino que se entrega al depositario para que la devuelva. 88 Agrega que
sera mejor hablar de "constitutum possessorium" (siguiendo a Enneccerus, Kipp y
Wolf) ya que el poder material del depositario sobre la cosa a custodiar -res
deposita- es de detentador, pues el depositante tiene la posesin de la cosa que
dio en depsito: la detentacin es una relacin de continuidad fsica de la cosa corpus-y de un especial "animus" que desde luego no es el de poseer, y no puede
decirse que sea slo en inters ajeno, pues el detentador tiene tambin un inters
propio: cumplir la obligacin que le incumbe, porque de lo contrario incurrir en
responsabilidad.
Por nuestra parte creemos que tanto la "traditio brevi manu" como el "constituto
posesorio" importan un cambio de nimo en la posesin de quien es su titular. A su
vez, ambas figuras constituyen una excepcin al requisito de la tradicin como
entrega y recepcin voluntarias de la cosa (art. 2377 [20] del C.C.), necesaria para
que se produzca la transferencia del dominio. El "constituto posesorio" es aplicable
al caso del depsito ya que el titular posee la cosa "animus domini" y transfiere el
dominio a un tercero convirtindose en poseedor a nombre del mismo (art. 2461 y
2462 del C.C.) al cambiar su "animus" por el de tenedor no dueo. En el depsito
regular la "traditio brevi manu" no es aplicable pues este instituto supone el cambio
de "animus" en forma inversa, esto es decir que quien posea a nombre de otro
88
Muoz, Luis., "Derecho Comercial", Tipografa Editora Argentina, Buenos Aires 1960 pg 80.
127
Lorenzetti, Ricardo Luis, "Tratado de los Contratos", Rubinzal-Culzoni Editores Tomo II, pg. 665.
Cm Nac. Civil Sala C, 26 de junio de 1997, Autos: "Rodrguez, Juan C.F.c/ Jonisz, Miguel y Otros". Compraventa de
inmuebles. Formas de la tradicin. Pago de precio. Simulacin. Revista del Notariado Doctrina N 894-1998 pg 275.
Voto del doctor Jorge H. Alterini :... que el comprador quisiera asegurarse el cobro de su crdito por medio de la dacin
en pago con asuncin de hipoteca, indica una actitud previsora y no el concierto para simular un acto que por hiptesis
debe suponerse sincero.
91
Lorenzetti, Ricardo Luis, ob. cit pg 649.
92
bajo el uso de quien carece de ttulo para ello, sea por tener una obligacin
exigible de restituirlo o por revestir el carcter de intruso. Concretamente y con
relacin a la accin de desalojo, afirma Palacio 97 que la pretensin de desalojo es
admisible en todos aquellos casos en que el demandado carezca de todo derecho
para oponerse a la restitucin, an cuando sea porque ocupa gratuitamente la
cosa mediante un ttulo que es revocable a voluntad del que le ha concedido este
derecho (p.e. el depositante). Esta pretensin es personal y tiene competencia el
juez del lugar de la situacin del inmueble.
6. CRITICAS A LA FIGURA.
La figura del Fideicomiso de Garanta no es pacficamente aceptada ni por la
doctrina ni en el derecho comparado. El caos jurdico-econmico que
recurrentemente sufre nuestro pas, no es justificacin suficiente para defender su
validez, y es por ello que conviene analizar las crticas ms o menos profundas
que ha sufrido esta figura.
Las principales resistencias a la misma se centran en sostener que: se trata de una
figura que vulnera el derecho de defensa del deudor; que se protege
principalmente al acreedor en desmedro del deudor, que se vulnera la garanta del
debido proceso (de raigambre constitucional en nuestro pas C.N. art. 18 [34]), o
que es violatoria de la prohibicin del pacto comisorio (art. 3222 [35] Cdigo Civil).
Otras, citan la falta de mencin expresa de la figura en la Ley 24.441, que los
derechos reales de garanta tipificados son suficientes para proteger cualquier
crdito, que el desplazamiento de la cosa del deudor al Fiduciario lo condena al
fracaso tal como sucedi con la anticresis, que de otorgarse un comodato para
solucionar el tema de la posesin se estara incurriendo en un acto simulado, que
se viola el numerus clausus del art. 2502 del Cdigo Civil, y otras crticas de menor
entidad.
Pero no debe olvidarse que el pacto de fiducia es un contrato estipulado libremente
entre las partes (fiduciante y fiduciario), que implica la obligacin del fiduciario de
llevar adelante determinadas conductas en l reguladas en garanta del
cumplimiento de una obligacin (del fiduciante o de un tercero). Por tanto, el
fiduciario no debe "ejecutar" los bienes en trminos estrictamente procesales, sino
cumplir con aquello a lo que se oblig en virtud de dicho pacto y cuyo disparador
ser el incumplimiento de la obligacin garantizada. De all la trascendencia de
dejar bien determinado en el contrato cuyo cumplimiento se garantiza, tanto como
en el contrato de fideicomiso, las condiciones claras y expresas del procedimiento
para determinar la comprobacin de incumplimiento de la obligacin garantizada y
los actos que se pretende el fiduciario realice una vez corroborado tal hecho, como
as tambin la forma de disposicin del patrimonio fideicomitido para cumplir con la
obligacin garantizada, es decir cmo se llevar adelante el cumplimiento del
97
Palacio, Luis Enrique, "Manual de derecho procesal civil", Ed. Abeledo Perrot. Undcima edicin actualizada. pg.
844.
130
Molina Sandoval, Carlos A., "El Fideicomiso en la dinmica mercantil", Ed. Abaco de Rodolfo Desalma, Bs. As. 2004.
pg 367, citando en la tesis de crtica a Peralta Mariscal, Leopoldo L. "Fideicomiso de garanta? Neuralgias y
cefaleas garantizadas!", LL T2000-D.
131
100
101
Prez Hualde, Fernando, "El Fideicomiso de Garanta. Tratado Terico Prctico de Fideicomiso". Colegio Notarial
de Mendoza. Directora Beatriz Maury de Gonzlez. Editorial Ad Hoc 2 Edicin. Primera Reimpresin. noviembre 2002
pg 221.
104
Prez Hualde, Fernando, ob. cit. pg 219.
133
Tampoco debe confundrselo con la venta con pacto de retroventa, pues en sta
se transfiere la propiedad plena y no slo el dominio fiduciario.
Es un contrato de confianza. Como vimos la circunstancia de que el fiduciante
conserve la tenencia del bien fideicomitido una vez celebrado el contrato, no
necesariamente debe llevar a la conclusin de que existe simulacin ilcita.
Tampoco se afecta el derecho de defensa en juicio (Art.18 C.N.), ya que cuando el
fiduciario dispone de los bienes para satisfacer la garanta, no hace otra cosa que
cumplir con el contrato, ms precisamente con el encargo fiduciario. El fiduciario
no "ejecuta" la garanta en sentido procesal, sino que cumple con lo que se
convino en incumplimiento de esta ltima. 105 (art 17 [40] Ley 24441). No existe
funcin jurisdiccional sino que el fiduciario se limita a constatar el incumplimiento.
Coincidimos tambin con Molina Sandoval: el fideicomiso puede emplearse como
garanta con preferencia, pero ello no implica que existe un nuevo derecho real de
garanta. El nico derecho real es el dominio fiduciario. Todo lo que no est
expresamente prohibido est permitido, entonces si el ordenamiento legal no ha
prohibido al Fideicomiso de Garanta, se puede afirmar la validez de su
constitucin. Sostenemos asimismo que la ley 24441 en sus artculos 19 [41] y 21
[42], expresamente contempla esta figura relacionada con el fideicomiso financiero.
Por su parte, la garanta est implcita en todo fideicomiso, ya que ante el
incumplimiento del fiduciario, el patrimonio fideicomitido es prenda comn de las
obligaciones vinculadas a la ejecucin del fideicomiso. 106 Adems - citando a Mario
Carregal 107 - sostiene este autor que "el acreedor no es el nico beneficiario del
fideicomiso de garanta, sino un beneficiario preferente sobre el precio de venta de
los bienes para el caso de incumplimiento de la obligacin garantizada. El
beneficiario subordinado sobre ese precio es el fiduciante en su condicin de
fideicomisario o beneficiario residual. En cambio, si la obligacin se cumple, el
fideicomisario pasa a cumplir el rol de beneficiario nico, pues a l retornan los
bienes fideicomitidos". Sealamos que en la constitucin del fideicomiso de
garanta necesariamente deben existir por separado las figuras de fiduciante,
fiduciario, beneficiario y fideicomisario, pues si se cumple la obligacin garantizada
los bienes remanentes debern entregarse al fiduciante en su carcter de
fideicomisario y no de beneficiario. Por otra parte, cuando el fiduciario -ante el
incumplimiento del deudor- satisface al acreedor garantizado, lo hace con bienes
integrantes del patrimonio fiduciario y no del patrimonio del deudor.
Una de las mayores ventajas del Fideicomiso de Garanta es la denominada
"extrajudicialidad" de la garanta, ya que para su efectivizacin (y no ejecucin
como errneamente se la denomina) se seguirn las pautas determinadas en el
contrato sin intervencin judicial. La seguridad que el acreedor obtiene con ste
tipo de garanta favorecer las condiciones en que se otorgar el crdito, tal vez
con una mejor tasa de inters u otras ventajas para el deudor. Siendo una garanta
105
106
107
Molina Sandoval, Carlos A., ob. cit pg 369 citando a Kiper, Claudio M. y Lisoprawski, Silvio ob, cit. pg. 12.
Molina Sandoval, Carlos A., ob. cit pg. 371.
Carregal, Mario, ob. cit. pg. 951.
134
108
Alegra, Hctor, "Las garantas autoliquidables", Revista de Derecho Privado y Comunitario No. 2 Garantas, Ed.
Rubinzal Culzoni, Santa Fe, pg. 152.
137
en cuanto al fraude a los acreedores anteriores del deudor, pues las normas
contenidas en los arts. 967 y 968 del Cdigo Civil respecto de la accin
revocatoria, establecen diferentes efectos en caso que el acto sea otorgado a ttulo
gratuito u oneroso, especialmente en cuanto a que la revocacin del mismo afecte
o no a terceros adquirentes de los bienes a ttulo oneroso, quienes en el supuesto
que se interprete que el Fideicomiso de Garanta encuadra dentro de la categora
de actos a ttulo gratuito, pueden ver afectados sus derechos adquiridos an a
pesar de ignorar la insolvencia del deudor.
Refirindose a la fianza, tpica garanta personal, "...los Mazeaud....siguiendo a
Pothier sostienen que el contrato de fianza nunca es a ttulo gratuito, pues el fiador
no se obliga para con el acreedor por un espritu de liberalidad o beneficencia, que
s puede existir en la relacin entre fiador y deudor". 112 Sostenemos que ninguna
garanta, sea personal o real, es otorgada por el garante respecto del acreedor en
forma de liberalidad, pues aqul no puede ignorar al momento de otorgarla, el
potencial perjuicio a su patrimonio que se producira en caso de ser demandado
por el acreedor a raz de su incumplimiento o el del deudor. Por otra parte, toda
garanta constituye siempre un acto jurdico otorgado en forma accesoria a otro
que es el principal, y por lo tanto sigue su suerte. El acto jurdico principal genera
obligaciones a cargo de la parte garante, las que siendo de dar, hacer o no hacer,
generan a su vez una deuda en el sentido del art. 496 el Cdigo Civil, por lo que la
garanta accesoria se constituye con el efecto de que el garante cumpla con esa
deuda hacia el acreedor, sea en hechos o en dar cosas, lo que de ninguna manera
puede considerarse una liberalidad o una acto a ttulo gratuito por comprometer el
patrimonio del garante.
Esta definicin, tiene un importante efecto, que cierta doctrina parece no
comprender al sostener que "...atento que la transferencia del dominio fiduciario no
se realiza a ttulo oneroso -nico supuesto en el que se exige la complicidad del
adquirente - para que prospere la accin de fraude ante una transferencia
fiduciaria no es necesario acreditar mala fe en cabeza del fiduciario, bastndole al
acreedor que se cumplan los requisitos establecidos por el art. 962 [44] del Cd.
Civil...si el fiduciario, en razn del encargo del fiduciante hubiere transmitido a otro
los derechos que de l hubiese adquirido deber estarse a lo normado por el art.
970 C.C.". 113 Creemos que tal anlisis no es aplicable al Fideicomiso de Garanta.
El pacto de fiducia contenido en la figura, es un pacto complejo compuesto de dos
momentos diferentes: en el primero destinado a garantizar obligaciones propias o
de terceros, el garante adquirir el carcter de fiduciante y el acreedor el de
beneficiario y ser siempre oneroso. En el segundo ambos pactarn con el
fiduciario la manda que el mismo deber cumplir en beneficio de ambos. Este
tramo del pacto de fiducia puede ser oneroso o gratuito dependiendo de si al
fiduciario se le reconoce o no una retribucin. La ley 24.441 lo presume siempre
oneroso (art. 8).
112
113
114
115
Ciuro Caldani, Miguel A, "Perspectivas Jurdicas", Ed. Fundacin para las Investigaciones Jurdicas, Rosario, 1985,
pg. 56.
116
Goldmisth, Werner "Derecho Internacional Privado". 4. Ed.., Depalma, Bs. As. 1982, pg. 109 citado por Ciuro
Caldani, Miguel Angel, ob cit. pg. 38.
139
Mosset Iturraspe, Jorge, "El fraude a la ley" en "Cdigo Civil y normas complementarias" de Bueres, Alberto J. y
Highton, Elena I., Ed. Hammurabi Bs. As. 1998 To. 2B pgs. 712 y ss.
119
Ferrara, Francisco, "Teora del Negocio Ilcito", Societ Editrice Milano, 1914 pg. 19 citado por Mosset Iturraspe,
Jorge en "El Fraude a la ley", Revista de Derecho Privado y Comunitario No. 4, Ed. Rubinzal Culzoni, Santa Fe, 1995,
pag. 37.
120
Mosset Iturraspe, Jorge, ob. cit. pg 40.
121
por otra parte sufre con la evolucin social pudindose producir "una reaccin
espontnea de la sociedad contra normas legales contrarias al sentir general, a los
sentimientos jurdicos de la colectividad en un determinado momento histrico". 122
Creemos que a fin de detener el anlisis pendular sobre la figura que oscila entre
la letra de la norma y su espritu o fin, debemos hallar un trmino integrador pues
ambos conceptos son individualmente insuficientes para encuadrar un negocio
jurdico como otorgado en fraude a la ley. Por ello sostenemos, que este
encuadramiento, requerir tanto de una violacin mediante el "rodeo" de una
norma imperativa prohibitiva o de principios de orden pblico (que lato sensu
tambin son normas imperativas), como de la violacin de los fines tico jurdicos
de esas normas o principios.
Respecto de ello "conviene atender a la reunin de ciertos sntomas para inducir
primero el desamparo real del acto y luego su condena: a) que el acto considerado
no sea el supuesto normal de la ley (la de cobertura); que se haya producido por
circunstancias anmalas o sospechosas; b) que su validez lleve a un resultado de
cierto matiz antijurdico, produzca daos a terceros, perjuicios al estado, vulnere
abiertamente una ley o contradiga algn principio general del derecho". 123 Deber
indagarse "cuales son los "intereses" comprometidos, los implicados en la norma
prohibitiva...si se concluye reconociendo una coincidencia de intereses se impone
la interpretacin extensiva de los textos con base en esa analoga del
resultado". 124 Luego de esta indagacin y ya en cuanto al aspecto interno del
negocio pretendidamente fraudulento, no bastar slo con la intencin de las
partes en sortear la norma legal, pues la intencin es insuficiente si no existe
violacin objetiva" de la norma: "el derecho es violado objetivamente o no lo es". 125
Para que se configure el fraude a la ley deben reunirse dos requisitos esenciales:
El primero referido a la existencia de una prohibicin legal contenida en una norma
imperativa sea o no de orden pblico, o a una prohibicin contenida en principios
de orden pblico, debiendo tambin indagarse si el acto produce una perturbacin
en los fines de esas normas o principios. El segundo, atinente a la voluntad de las
partes, exteriorizada con el fin de "rodear" la prohibicin otorgando un acto vlido
con "cobertura" legal para llegar al mismo efecto al que no pudieron acceder con el
acto prohibido.
En esta investigacin, no podemos contar con definiciones legales sobre la materia
pues nuestro Cdigo Civil no contiene una "norma imperativa" especfica que
sancione el fraude a la Ley. Pero, resaltamos, es absolutamente necesario tener
un marco objetivo para el encuadramiento del fraude a la ley, pues de
subjetivizarse en forma exclusiva el anlisis y tener en cuenta preponderantemente
el espritu y los fines de las normas o principios vulnerados, no puede dejarse de
lado el hecho de que ambas cuestiones dependen del tiempo social en que fue
122
123
Kemelmajer de Carlucci, Ada, voto en autos cit. "Pas, Pedro E. v/Tribunal de Cuentas de la Provincia".
De Castro Federico, "Compendio de Derecho Civil", 1996 Ed. Instituto de estudios polticos, Madrid, pg. 144 citado
por Aida Kemelmajer de Carlucci ob. cit.
124
Mosset Iturraspe, Jorge, ob. cit. pg 28.
125
Peralta Mariscal, Leopoldo L., ob. cit., e Isasmendi, Armando J., "El Fideicomiso en garanta en el derecho
nacional", LL-2003-D-20. Dice este autor: "frente al art. 2502 del Cd. Civil no hay norma legal de excepcin
derogatoria de estas restricciones" (pg. 25).
144
Clusellas, Eduardo G. y Ormaechea, Carolina, "Contratos con garanta fiduciaria". Ed. Abaco de Rodolfo Depalma.
Pg. 137.
128
Dvalos Meja, Carlos F., "Actualidad y futuro del fideicomiso en Mxico", Instituto Fiduciario Bancomer, obra
colectiva. Mxico, 1997, pg. 315 y 316.
145
acreedor s est facultado a apropiarse de los frutos para imputarlos al pago del
capital e intereses de su crdito, por lo que la norma introduce una cua en la idea
de que el acreedor no puede apropiarse de la cosa para pagarse su deuda.
En el Fideicomiso de Garanta que proponemos, el acreedor nunca podr
apropiarse del inmueble "per se" pues se lo impide su carcter de beneficiario que
depende del hecho del fiduciario. An si se sostiene que la Ley 24.441 no prohbe
la concurrencia de ambas figuras tampoco podra el acreedor-fiduciario apropiarse
de los bienes que componen el patrimonio fiduciario, pues al revestir el carcter de
parte fiduciaria se lo impedira la norma expresa del art. 7 de la Ley 24.441. Como
vemos la normativa legal coloca al fiduciante-deudor en similares o mejores
condiciones que las establecidas para la parte deudora en las garantas con
derechos reales, por lo que deber extremarse la precaucin al redactar el contrato
respectivo, a efectos de hacer transparente la ejecucin de la garanta dentro del
Fideicomiso.
9.5. EL FIDEICOMISO DE GARANTIA Y LA DEFENSA JUDICIAL DE LOS
DERECHOS DEL DEUDOR.
Al analizar este tema, no debemos descuidar los tiempos de cada sociedad donde
nace y se desarrolla cualquier figura del derecho. La figura del Fideicomiso tiene
su mayor desarrollo en un contexto social totalmente diferente al actual en nuestro
pas, cual es la denominada "economa de primer mundo". El triunfo del sistema
capitalista en las reglas de juego de la economa mundial, es un hecho indiscutible
tanto como que el mismo conlleva la imposicin de ciertas reglas jurdicas de ese
sistema.
Con respecto a la proteccin del deudor, se ha dicho que la "necesaria recurrencia
a la actuacin judicial previa o la exigencia de formalidades especiales para la
ejecucin...no resuelve hoy eficazmente problemas especficos que se puedan
presentar. As, la subasta judicial o el remate pblico no aseguran el mejor precio
objetivo de los bienes...por el contrario, estos procedimientos necesariamente
conllevan demoras y costos, que, lamentablemente, inciden sobre aquel a quien se
quiere proteger. Las demoras...en cuanto permiten que se sigan devengando
intereses y el crdito aumente...los costos, porque a veces insumen gran parte de
lo que realmente se obtiene en subastas o remates. La vida econmica moderna
ha generado una variedad de instrumentos y mecanismos de mercado que tienden
a la mejor utilizacin de los recursos....y que tratan de brindar respuesta a las
necesidades muy variadas tanto de los ahorristas como de los solicitantes de
crdito o capital. De otro lado, la especializacin y responsabilidad de los
intermediarios y operadores de los distintos mercados va estando sometida a
reglas que trascienden en apreciacin general...los mercados se van integrando
por efectos de fenmenos tecnolgicos en reas de computacin y comunicacin.
Todo ello lleva a la transparencia de los mbitos y a la formacin de precios, en
muchos mercados en forma objetiva, cognoscible y controlable.. la conjuncin de
estos elementos requiere soportes jurdicos aptos que se orienten con justicia
146
Alegra, Hctor, "Las Garantas autoliquidables" en Revista de Derecho Privado y Comunitario No. 2, Ed. Rubinzal
Culzoni Santa Fe, pg.. 160.
130
Ghersi, Carlos A., "Fideicomiso de Garanta resarcitoria". Ed. Rubinzal-Culzoni, pg. 82.
147
a comprobar una situacin de hecho: la falta de pago por parte del deudor". 131 Es
por esto que para determinar la mora es conveniente establecer en el contrato
formas de pago objetivamente verificables.
En cuanto al procedimiento para realizacin de los bienes existen infinidad de
posibilidades. Todas ellas podrn resultar seguras y efectivas tanto para el deudor
como para el acreedor, pero no creemos conveniente librar al fiduciario la eleccin
del procedimiento de realizacin de bienes, propiciando que se estipule claramente
en el mismo contrato el modus operandi con el cual deber actuar el fiduciario.
Siguiendo a Mosset Iturraspe afirmamos que "el negocio fiduciario es un negocio
real, seriamente querido, no un negocio simulado" 132 y adems no es un negocio
"contra legem" ya que no viola ninguna norma legal. Menos an puede
considerarse otorgado en fraude a la ley pues el pacto de fiducia, si bien atpico
por no detallarse en la normativa legal sus posibilidades, no puede entenderse
como elusin de alguna norma imperativa o principio de orden pblico o como un
"rodeo" al espritu de la ley.
10. EL FIDEICOMISO DE GARANTIA EN EL PROCESO FALENCIAL DEL
DEUDOR.
La apertura del concurso o quiebra del deudor fiduciante en el Fideicomiso de
Garanta trae consigo los siguientes interrogantes: a) cules de los derechos y
obligaciones emergentes del contrato deben ser verificados en el proceso falencial,
b) si el fiduciario dar cumplimiento a la manda fiduciaria fuera del proceso
falencial o si ste la atrae.
El anlisis refiere en principio, a si el acreedor beneficiario debe verificar su crdito
y en su caso denunciar la garanta, y adems si sta se considerara privilegiada.
Respondemos a este interrogante que el beneficiario-acreedor siempre deber
verificar el crdito dentro del proceso, porque debe validarse su derecho respecto
del resto de los acreedores.
La verificacin de la obligacin principal, deber hacerse como quirografaria dado
que la citada garanta con privilegio legal (art. 15 Ley 24.441), lo es slo fuera del
proceso falencial porque proviene de un patrimonio separado al del deudor fallido.
El beneficiario-acreedor no puede verificar su garanta privilegiada dentro del
concurso simplemente porque ella proviene de otro patrimonio como cualquier otra
obligacin del fallido garantizada por un tercero. Pero en el caso del Fideicomiso
de Garanta, no se producir como en las garantas personales, el reemplazo de
acreedor por subrogacin si es que el tercero paga al afianzado, pues el fiduciario
131
132
Mosset Iturraspe, Jorge A "Negocios simulados, fraudulentos y fiduciarios", Ediar, Buenos Aires, 1975, To. II pg.
211 y ss.
148
Alegra, Hector, "Fideicomiso en Garanta (efecto sobre los crditos garantizados y verificacin en el concurso del
Fiduciante)", LL 2004-D-847.
149
Kiper, Claudio A. y Lisoprawski,, Sivio V. ob. cit. pag 487, Heredia, Pablo D, "Tratado exegtico de derecho
concursal", Ed. Abaco Bs. AS. 2000 To. 1 pag 677, Marquez, Jos Fernando "El fideicomiso de garanta y el concurso
del Fiduciante", Revista de Derecho Privado y Comunitario 2000-3 pg. 143, citados por Hctor Alegra ob. cit. pg.
851.
150
2006
www.saij.jus.gov.ar
Id Infojus: DASC060095
1) En la actualidad, la proteccin del crdito va adquiriendo nuevos matices que
frente al marco de las garantas tpicas tradicionales abren camino a una serie de
figuras con caracteres diferentes y ms adecuados a la realidad negocial,
respondiendo a la necesidad de brindar garantas ms giles, de escasa
formalidad y bajo costo.
2) La rigidez del sistema tradicional cede ante las necesidades del trfico, a travs
del ejercicio de la autonoma de la voluntad, la cual se plasma en negocios de
garanta ms flexibles.
3) Esta flexibilidad se manifiesta en dos planos: a) la posibilidad de otorgar
garanta no slo al tiempo de la celebracin del contrato sino tambin durante la
etapa de cumplimiento del mismo y en forma adecuada y proporcional a las
circunstancias que lo ocasionan; b) el auge de los negocios jurdicos de garanta
autnomos ya sean atpicos o indirectos.
4) Si bien consideramos beneficiosas estas nuevas manifestaciones negociales,
deben tenerse presente de manera ineludible las relaciones de integracin,
funcionamiento y aplicacin de los principios contractuales, teniendo preeminencia
siempre la norma imperativa o de orden pblico.
5) En este contexto, en el fideicomiso de garanta, el acreedor no puede
constituirse en fiduciario y beneficiario y/o fideicomisario, ya que se estara
desnaturalizando la figura jurdica, no slo ya en su finalidad sino que tambin en
135
136
137
Mara Florencia Culasso. JTP Derecho Civil III. Facultad de Derecho. UNR.
.Melina Llodr. JTP. Derecho Civil III. Facultad de Derecho. UNR.
Julieta Trivisonno. 2 Ao de Adscripcin. Derecho Civil III. Facultad de Derecho. UNR.
151
su naturaleza contractual, lo que trae aparejada una grave contradiccin con las
normas de orden pblico.
En toda economa y especialmente en una economa de mercado, la proteccin
del crdito es fundamental a la hora de brindar un marco adecuado de orden y
seguridad, el cual resulta imprescindible para cualquier emprendimiento
econmico.
Esta proteccin del crdito va adquiriendo diferentes matices que se plasman en
nuevas tendencias en materia de garantas, las cuales en definitiva, responden y
se adecuan a las crecientes necesidades del mercado.
As, en una primera aproximacin al fenmeno, podemos mencionar que se
advierte una suerte de flexibilizacin de las garantas reales, como ha ocurrido en
el caso de la hipoteca abierta, la prenda con registro y la posibilidad de su
ejecucin extrajudicial. Entendemos que en materia de garantas personales, est
ocurriendo un fenmeno similar que va dando lugar a la cada vez ms creciente
autonoma del negocio de garanta, autonoma que, en el mbito del mercado
econmico, se exterioriza, dando lugar al surgimiento de una serie de nuevas
figuras atpicas y a la independencia de vnculos respecto del crdito-deuda
garantizado; todo lo cual nos lleva a analizar las posibles causas y el alcance del
impacto que estas tendencias ocasionan en nuestra normativa vigente.
En este orden de ideas, advertimos que, frente al cuadro de las garantas
tradicionales, existen hoy en el plano de la realidad social nuevas manifestaciones
negociales, 138 las que, desde un punto de vista jurdico se traducen en: falta de
utilizacin -desuso- de las garantas reales tpicas (hipoteca, prenda, anticresis) ; el
mayor empleo de las garantas personales tpicas (fianza) o atpicas (garanta a
primer demanda), y, el uso continuo y recurrente de negocios indirectos de
garanta (venta con pacto de retroventa con fines de garanta, leasing de retro, el
fideicomiso de garanta, el mandato con fines de garanta, el mandato de crdito, la
opcin en garanta y los negocios fiduciarios con fines de garanta).
Creemos que existen una serie de causas que explican el surgimiento y el
incremento de estas figuras en el plano de la realidad social, obedeciendo stas a
razones de ndole econmica y jurdica.
Dentro de las causas originadas en razones de ndole econmica individualizamos,
la necesidad de crear mtodos menos onerosos y ms fciles, rpidos y giles de
ejecucin en comparacin con los ofrecidos por las garantas tradicionales.
138
Tomamos en consideracin los argumentos expresados por, de Reina Tartire Gabriel, en "Las garantas reales
atpicas (La propiedad como garanta)", artculo correspondiente a la Seccin Doctrina y publicado en J.A.III.1000.
SJA.08.09.2004.
152
Tomamos a los fines del anlisis de esta propuesta, la definicin construida y presentada en la ponencia efectuada
por la Dra. Noem Nicolau (Comisin N 1) en ocasin de celebrarse las XX Jornadas Nacionales de Derecho Civil. Ao
2005. Y as, transcribimos la Recomendacin N 7 que expresa: "... el negocio indirecto de garanta es aqul mediante
el cual se pretende obtener la finalidad prctica de asegurar aprovechando un tipo negocial cuya finalidad objetiva es
diversa ...".
153
154
Cabe recordar que en el Derecho Norteamericano si bien los diferentes intentos de unificacin del derecho
imperante (Uniform Comercial Code, Restatement of Torts, Restatement of Contracts) no tienen el carcter de fuente
vinculante dentro del sistema del common law, en realidad y en la prctica jurdica, los mismos tienen una fuerte
influencia en los decisorios de los jueces, por ello los citamos y entendemos que estn lejos de ser una fuente
meramente persuasiva.
141
Regulado dentro del Art. 2 que trata el contrato de compraventa mercantil.
155
En este sentido las diferentes o similares conductas que las partes fueron llevando a cabo durante el transcurso del
contrato o en contrataciones previas, se analizan en forma acumulativa a los fines de caracterizar las nuevas
circunstancias que hacen dudar sobre el cumplimiento efectivo de las prestaciones y la razonabilidad de esta
sospecha.
143
El 4to. prrafo de la Seccin 2-609 establece como parmetro de plazo razonable un tiempo no mayor a treinta
das.
144
El anlisis en torno a que se entiende por "garanta adecuada de cumplimiento", tambin debe hacerse a la luz de
las circunstancias fcticas y en especial relacin en torno a los hechos que han generado esta razonable sospecha de
incumplimiento. Es decir, la exigencia de esta garanta debe ser "proporcional" al hecho que ocasion su pedido. Por
ejemplo, en algunos casos una certificacin bancaria sobre la existencia de solvencia puede ser suficiente, mientras
que, en otros se podr requerir el otorgamiento de una garanta en particular.
145
Bajo el ttulo "Cuando el fracaso a otorgar una garanta puede ser entendido como rechazo e incumplimiento del
contrato".
146
El cual se encuentra regulado en la Seccin 243.
156
Vemos que en los dos supuestos analizados, la seguridad o garanta exigida viene
a cumplir una funcin "preventiva" frente al razonable riesgo que existe de que uno
de los sujetos contratantes, transcurrido un plazo desde que se ha celebrado el
contrato, no vaya a cumplir con aquello a lo que se ha obligado.
Cabe destacar que el concepto de garanta al que aluden ambos preceptos es bien
amplio, y, conforme mencionramos anteriormente, debe principalmente analizarse
a la luz de las circunstancias fcticas y en consideracin a los hechos que han
generado este pedido.
Es decir, segn el caso, la nocin de "garanta o seguridad adecuada" puede
abarcar desde el otorgamiento de garantas tradicionales - personales o reales- ,
acreditacin de solvencia - ya sea por un tercero como una entidad bancaria o
financiera o el informe de un banco de datos sobre ttulos de propiedad - e incluso
la mera promesa de que se cumplir efectivamente con lo pactado.
Partiendo de la base de que los contratos se celebran para ser cumplidos siempre considerando las circunstancias que pueden presentarse en la etapa de
ejecucin del mismo y respetando la funcin o finalidad econmico social tenida en
cuenta por los contratantes - , entendemos que los institutos comentados dan una
solucin prctica frente a supuestos en los que una de las partes, tenga motivos
fundados para sospechar que la otra no pueda llevar a cabo el efectivo
cumplimiento de sus prestaciones.
Entonces, la posibilidad de exigir esta garanta de adecuado cumplimiento, brinda
el marco necesario de seguridad y confianza en los negocios, sumado al hecho de
que frente al fracaso de brindar esta garanta, las consecuencias de dicho
incumplimiento resultarn menos gravosas para ambas partes, ya que, el sujeto
acreedor al haber suspendido las prestaciones a su cargo, podr reinsertarlas ms
rpidamente en su flujo comercial y en consecuencia, menores sern los daos
ocasionados.
Asimismo, entendemos que por las cualidades que reviste esta figura, la misma
cumple con la finalidad prctica que se busca actualmente en materia contractual,
es decir, asegurarse el cumplimiento del contrato mediante medios de bajo costo,
giles y de escasa formalidad.
Es evidente que este tipo de figuras no podran ser extrapoladas a nuestro
Derecho sin una serie de adecuaciones, principalmente considerando las
diferencias estructurales entre ambos sistemas y la cultura imperante en cada uno
de ellos. Sin embargo, creemos que existen algunos indicios y tendencias en el
derecho argentino que marcan un rumbo semejante.
157
147
En materia de contrato de compraventa, el artculo 1419 del actual CC establece que el vendedor no se encuentra
obligado a entregar la cosa si despus de celebrada la venta y cuando se hubiese otorgado un plazo para el pago, el
comprador cae en estado de insolvencia y no afianza el pago
148
En relacin a estas categoras negociales, tomamos los criterios clasificatorios expresados por: Noem Nicolau, "Los
Negocios de Garanta" en Trabajos del Centro de Investigaciones de Derecho Civil. Boletn N 3. Ao 1998. Pginas
20, 23 y sigs.
149
Si bien este instituto no se encuentra expresamente regulado en el texto de la Ley 24.441, en diversos casos
jurisprudenciales se lo ha admitido en forma expresa o implcita. En este sentido puede verse: CNCiv., Sala B,
05/03/2002, "El Albail S.A. c/ G.,N. J. M.", JA 2002-II-512; CNC y Com. Fed.,28/07/2005, "Crivelli Construcciones S.A.
y Otro c/ Banco Hipotecario S.A. s/ Medidas Cautelares", LL 2005-E, 878; CNac, Cont. Adm. Fed., Sala 2, 14/06/2005,
"Banco Hipotecario S.A. c/ Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires/ Resolucin SICyTT 244/2000", SJA 03/05/2005;
CSJN, 04/11/2003, "E.G.C. S.A. c/ Banco Hipotecario S.A.", Fallos 326:4504; Sup. Corte Just. De Mendoza, Sala 1,
07/07/2000, "Nazar y Ca S.A.", Lexis Nexis OnLine N 70008269; Sup. Corte Just. De Mendoza, Sala 1, 06/08/1997,
"Banco de Mendoza en Carbometal SAIC por concurso preventivo sobre casacin", ED 180-514 o Lexis Nexis Online
N 70010099; CNac. Com., Sala C, 20/02/2001, "Aqua King de Argentina S.A. s/ Pedido de quiebra por Banco Ro de la
Plata S.A.", Lexis Nexis Online N 30002633.
158
la figura si, ante un supuesto en particular, coinciden la persona del fiduciario con
la del beneficiario, o, con la del fideicomisario.
En el fideicomiso de garanta los bienes se encuentran bajo titularidad del fiduciario
integrando ellos un patrimonio de afectacin. 150 Consideramos que, la finalidad de
garanta va ligada o debe ir ligada de manera directa al inters respecto del cual se
lleva a cabo la gestin del patrimonio, esto es al inters del beneficiario.
Entendemos que si en un supuesto en particular, el acreedor es fiduciario y
beneficiario y/o fideicomisario, se estara desnaturalizando la figura jurdica, no
slo ya en su finalidad sino que tambin en su naturaleza contractual, y,
sostenemos adems que sta desnaturalizacin trae aparejada una grave
contradiccin a normas de orden pblico. 151
Veamos:
1) En primer lugar, el fideicomiso va unido a una idea de gestin en beneficio ajeno
y esa gestin que recae sobre el patrimonio que se constituye es precisamente la
finalidad por la cual adems el fiduciario debe rendir cuentas al beneficiario,
150
A este respecto nos parece ilustrativo lo sealado en los ya citados autos "Nazar y CIA S.A." por la Suprema Corte
de Justicia de Mendoza. En su voto la Dra. Kemelmajer de Carlucci seal: "Otra nota caracterizante es que los bienes
salen del patrimonio del fiduciante para pasar a formar un patrimonio separado, de titularidad del fiduciario. En otras
palabras, en el negocio fiduciario, el fiduciante transmite el dominio al fiduciario. Esta es la posicin de Cariota Ferrara
en el derecho italiano, a la que la doctrina nacional adhiere casi sin discusin (Compulsar, entre otros, Mosset
Iturraspe, Jorge, "Negocio fiduciario con fines de garanta -trust o fideicomiso en garanta-" Rev. de D. Privado y
Comunitario n. 2, Garantas, p. 83), aunque, como dice Maffa, se trate de un "ser y no ser propietario al modo familiar",
desde que esos bienes tampoco responden frente a los acreedores del fiduciario; en efecto, la Ley 24441 dispone que
los bienes fideicomitidos responden por las deudas resultantes de la ejecucin del fideicomiso y no forman parte ni del
concurso del fiduciante ni del fiduciario, salvo fraude... Por eso, puede decirse que el fiduciario adquiere los bienes a
ttulo de dominio, aunque esos bienes no integran su patrimonio a los fines de su garanta patrimonial. Pero es dueo,
pues puede disponer a ttulo de dueo; el fideicomiso no le impide obrar como dominus, aunque quebrando lo
convenido con el fiduciante y slo est sujeto a las responsabilidades propias del incumplimiento de una obligacin
asumida ante su co-contratante (Maffa, Osvaldo, "Verificacin de crditos", 4 ed., Bs. As., Depalma, 1999, p. 514 y
517)".
Por otra parte, en los autos citados precedentemente " El Albail S.A. c/ G, N.J.M." el actor (fiduciante) promovi
demanda por remocin del fiduciario solicitando una medida cautelar de no innovar, la cual fuera decretada por la
magistrada que intervena entonces. El demandado en su responde solicit sustituir esta medida por la designacin de
un interventor informante, lo cual le fuera concedido por un nuevo juez interviniente. Esta sustitucin es apelada por el
fiduciante aduciendo, entre otras cosas que el bien fideicomitido sigue siendo de su propiedad, y la Cmara
interviniente la confirma. Entre otros argumentos, la Cmara seala que la prohibicin de innovar es opuesta a la
finalidad del fideicomiso, pues existen diversos intereses a tutelar (beneficiario, fiduciante y fideicomisario) y que la
medida ordenada mantiene la garanta para todas las partes interesadas provocando el menor perjuicio, destacando,
en cita de Alfaro, que "...hace a la esencia del fideicomiso e indispensable a sus fines que el constituyente se aparte de
la propiedad de los bienes sobre los cuales versa y que los transmita a la persona en quien deposita su confianza...".
151
Citamos asimismo como fundamentos a nuestra exposicin, el anlisis especfico que sobre el tema se ha
efectuado por: Frustagli Sandra, y, Galano Carina, "La regulacin del fideicomiso de garanta en la Ley N 24441 y su
incidencia sobre los negocios fiduciarios en garanta". En Trabajos del Centro de Investigaciones de Derecho Civil.
U.N.R. Facultad de Derecho. Boletn N 3. Ao 1998. Pgs. 69, 70, y, 71.
159
En idntico sentido: Isasmendi Armando. "El fideicomiso en garanta en el Derecho Nacional". En LL. T. 2003.D.
Pgs. 25 y 27
160
En este sentido puede verse CSJN, 04/11/2003, en autos "E.G.C. S.A. c/ Banco Hipotecario S.A.", Fallos 326:4504.
La CSJN por mayora declar inadmisible el recurso extraordinario, pero la minora disidente (Dres. Fayt y Vazquez) se
pronunci por dejar sin efecto la medida cautelar de no innovar dictada, en virtud de la cual se decidi suspender la
ejecucin de los fideicomisos sobre inmuebles de propiedad de una la constructora "EGC S.A." mutuaria y fiduciante. El
voto en minora consider que la medida de no innovar es contraria a la naturaleza misma del fideicomiso, y no opuso
reparos a la reunin de las calidades de fiduciario y beneficiario en la persona del acreedor o mutuante (Banco
Hipotecario).
Por otra parte, en los autos "Banco Hipotecario S.A. c/ Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires/ Resolucin SICyTT
244/2000", el Banco apela una resolucin de la Secretara de Industria y Comercio de la Ciudad de Buenos Aires por
medio de la cual se le impone una multa por considerar que ha cometido una infraccin a la Ley 24.240. La Cmara
Nacional en lo Contencioso Administrativo de Capital Federal, Sala 2, seala en su pronunciamiento que "...el Banco
Hipotecario ha acumulado dos roles que a priori acorde con las previsiones de la ley 24.441, resultan independientes fiduciario y beneficiario-. Hemos visto que el fideicomiso supone la administracin fiduciaria de los bienes en beneficio
de terceros, empero en el caso quien tiene el dominio fiduciario es a la vez el principal beneficiado por la operatoria, su
crdito ser satisfecho en primer trmino con el producido de los bienes fideicomitidos, quedando el remanente para su
contraparte...". Al parecer la reunin de ambos roles es advertida por la Cmara pero no realiza ninguna objecin a
ello, quizs porque no constituya materia principal del decisorio. Sin embargo, considera acertada la imputacin de
responsabilidad al Banco por incumplimiento de la normativa de Defensa del Consumidor porque concluye que el
mismo ha integrado la cadena de comercializacin en los trminos del artculo 40 de la Ley 24.240 y para ello tiene
especialmente en cuenta el hecho de que el Banco no es un simple tercero porque no slo gestiona la venta de las
unidades sino tambin porque el producido se destinaba en primer trmino a satisfacer su crdito (esto es su calidad
de beneficiario del fideicomiso).
161
155
En las XI Jornadas Nacionales de Derecho Civil, la Comisin N 8 arrib a las siguientes conclusiones en relacin al
principio de la buena fe y su funcin en el derecho patrimonial: "... la regla de la buena fe integra el derecho objetivo
con aptitud jurgena propia, con independencia de su funcin interpretativa,..., asimismo, marca y limita el ejercicio de
los derechos subjetivos...". En Congresos y jornadas nacionales de Derecho Civil. Editorial La Ley. Ao 2005. Pg. 93.
162
ENCICLOPEDIA INFOJUS
9 de febrero de 2004
LA LEY
Id Infojus: DACF040032
Algunas autoridades calificaron de "generosa" a la ley 25.798 [1]. Por el contrario,
para los acreedores aparece como un "corralito" agravado. Resulta distorsivo ,
legislar sobre la base que todos los deudores serian "buenos" y que todos los
acreedores seran "malos" o que los primeros merecern la proteccin del orden
jurdico y los segundos no Entre los acreedores hipotecarios particulares, que son
discriminados con relacin a las entidades financieras en la ley 25.798, como se
ver, hay trabajadores cesantes que invirtieron en hipoteca su indemnizacin o su
retiro "voluntario" , personas que vendieron sus viviendas porque les resultaban
muy chicas e invirtieron el producido mientras ahorraban para comprar otra ms
grande, jubilados que invirtieron sus ahorros producto de sacrificios para
complementar sus magros haberes previsionales, viudas y muchos otros casos
dignos de consideracin. Todas estas personas confiaron en las normas vigentes.
Qu pasa si algunos de ellos son discapacitados, de edad avanzada, o si deben
intervenirse quirrgicamente? Este nuevo corralito no contempla situaciones de
excepcin. Sin perjuicio de ello, ni siquiera debera ser necesario estar incluido en
una situacin de excepcin para hacer efectivas garantas constitucionales.
Se deca que cuando el Fondo Monetario Internacional cuestionaba la suspensin
de las ejecuciones o actos de subasta, lo haca en defensa de los intereses de los
bancos. En coincidencia con ello, esta nueva ley deja a salvo los derechos de las
entidades financieras. Los acreedores particulares carentes de apoyo del Fondo
Monetario y de todo lobby corporativo, son maltratados por esta ley.
Lo siguiente configura una hiptesis de discriminacin violatoria de la garanta
constitucional de igualdad ante la ley (art. 16 C.N [2].). El art. 6 [3] de esta ley
dispone que la opcin el por el sistema le corresponde exclusivamente al acreedor,
cuando sea una entidad financiera y en los dems casos la puede ejercer el
deudor o el acreedor. Como el sistema resulta confiscatorio para el acreedor,
segn se ver, cabe entender que en la generalidad de los casos la opcin la har
el deudor. La ley no prev que cuando una de las partes del mutuo no bancario
ejerza la opcin la otra pueda oponerse, Las restantes normas de la ley son
imperativas. , de modo que la expresin "Carcter optativo del sistema", que
encabeza el art. 6 resulta un eufemismo con respecto al acreedor particular.
De la alambicada redaccin del art. 6 resultara que los acreedores bancarios y
los deudores no bancarios pueden elegir la inclusin en el sistema con efecto
163
Colautti, Carlos E. Derechos Humanos, Editorial Universidad , Buenos Aires, 1995 pg. 204 y 205.
Columna de Opinin, La Ley 29-12-03 pg. 1.
164
destino del prstamo haya sido la adquisicin, mejora, construccin y/o ampliacin,
de vivienda, o la cancelacin de mutuos constituidos originariamente para
cualquiera de los destinos antes mencionados". Segn el decreto reglamentario
1284 / 2003 [5] (anexo I art. 2 inciso b), "El destino del mutuo podr acreditarse a
travs de la respectiva escritura constitutiva del derecho real de hipoteca, o por la
documentacin respaldatoria del destino otorgado el referido mutuo". Cuando se
pretenda probar el destino mediante la "documentacin respaldatoria" habr que
ser muy riguroso en cuanto a las exigencias de esta documentacin. Como la ley
25.798 y su decreto reglamentario, enfatizan las exigencias relativas a la situacin
fiscal del acreedor, al igual que su contempornea ley 25.795 [13], resultara
contrario a la garanta constitucional de igualdad ante la ley, permitir al deudor
acreditar el destino del mutuo mediante boletas sin indicacin de CUIT o sin IVA.
En cuanto a la escritura, la misma resulta probatoria del destino dado al mutuo,
exclusivamente cuando se trata de una escritura de compra y la hipoteca es por
saldo de precio. Cuando se trata de un prstamo garantizado con hipoteca sobre
un bien preexistente del deudor, la simple manifestacin del mismo en el sentido
que lo utilizar para mejora o ampliacin, no es algo sobre lo cual el instrumento
pblico resulte probatorio. Es slo la expresin de una intencin respecto de una
actividad futura, y esta eventual actividad no sucede delante del oficial pblico.
Conforme el art. 16 inciso a) [6] de la ley, el fiduciario proceder a "poner al da"
los mutuos elegibles, a cuyos efectos "Cancelar al acreedor las cuotas de capital
pendientes de pago desde la mora hasta la fecha de dicho pago...".
Posteriormente, el inciso b) [6] del mismo artculo dice que en adelante el fiduciario
observar respecto del acreedor las condiciones originales del mutuo, salvo en lo
relativo a coeficiente de actualizacin y tasa de inters.
Del juego de ambos incisos surge que la ley divide, a los efectos de brindarle un
tratamiento diferenciado, las cuotas de capital que habran vencido hasta el
momento en que se hace cargo el fiduciario y las que vencern posteriormente. En
este punto, la ley soslaya, deliberadamente o no, que la generalidad de las
escrituras hipotecarias incluyen clusulas de caducidad de plazos por medio de las
cuales la mora origina la exigibilidad del saldo total. La exigibilidad del saldo total,
una vez operada, queda incorporada al derecho de propiedad del acreedor en su
sentido amplio reconocido por la constitucin nacional, mxime en los muchos
casos en que hay sentencia condenando al deudor al pago ntegro del capital
reclamado. La cosa juzgada del juicio ejecutivo, es definitiva en aquellos rubros
que no son susceptibles de revisin en juicio ordinario posterior. En este sentido, la
constatacin de la mora y consiguiente declaracin de exigibilidad de todo el
capital es irrevisible.
La Corte Suprema ha establecido: "Que, reiteradamente , esta Corte ha sealado
que el contenido del derecho constitucional de propiedad se vincula con la nocin
de derechos adquiridos , o sea, de derechos definitivamente incorporados al
patrimonio de una persona (Fallos 312:1121). De ah que tambin el Tribunal haya
sostenido que 'cuando bajo la vigencia de una ley un particular ha cumplido todos
165
CSJN "Pcia. de San Luis c/ Estado Nacional" 5-3-03 Considerando 48 del voto mayoritario.
166
Expediente N2 12.127 / 01 Juzgado Nacional de 1a instancia en lo Civil Ne 54 , fallo le instancia del 9-11-02 Juez
Dr. Ricardo Li Rosi. "Piola, Martn y otros c/ Roftiguez, Carlos Daniel s/ ejecucin hipotecaria"
160
Highton, Federico R. "El fallo Provincia de San Luis: Su repercusin sobre otros amparos de depsitos acorralados
y sobre otro tipo de acreencias (bancarias, particulares, hipotecarias)" El Derecho 3-4-03 pg. 1.
167
XSJN "Banco de Galicia y Buenos Aires s/ solicita intervencin urgente en autos Smith Carlos Antonio c PEN s/
sumarsimo" 1-2-02, al cual se hace una remisin expresa, en este tema, en los autos Pcia. de San Luis ya citados.
168
2002
www.saij.jus.gov.ar
Id Infojus: DACF020047
I. Nuevas garantas En el mercado contemporneo, junto a las tradicionales
garantas de carcter accesorio a la deuda, se abre paso una nueva modalidad de
carcter autnomo. 163 Cualquiera de las dos formas refuerzan la efectividad del
162
163
La admisin de estas dos formas de garantas supone previamente distinguir la garanta de la obligacin de la del
crdito. La primera acepcin responde a la calidad del patrimonio como garanta comn de los acreedores. Por ella se
les reconoce a estos ltimos derechos de control, medidas de conservacin o cautelares, medidas de ejecucin
individual o colectiva y medidas reparadoras. Desde esta perspectiva la garanta es parte de la estructura de la
obligacin. No se le agrega al acreedor un bien distinto, ni un deudor ms. Esto s ocurre en la garanta del crdito y
con ello se refuerza la efectividad del derecho del acreedor. Desde esta segunda acepcin, la garanta es una calidad
del crdito y no es parte de la estructura de la obligacin. Esta acepcin es la que a su vez admite la distincin entre
garantas accesorias y autnomas. Cfr. LORENZETTI, R. L., Tratado de los Contratos, T. III, Rubinzal Culzoni, Santa
Fe, 1999, 479 y s. Las garantas autnomas aparecieron primeramente en el mercado internacional, pero hoy su uso se
proyecta tambin en los mercados internos. Precisamente por su ascendencia internacional, existen diferentes
denominaciones para el instituto. As, por ejemplo, en Francia y en Espaa se las conoce como garantas
170
independientes o autnomas, en Alemania como garantas bancarias, y en Argentina algunos autores prefieren la
denominacin de garantas abstractas. Cfr. ETCHEVERRY, R., Contratos. Parte Especial, 2, Astrea, Bs. As., 1994, p.
145 y s. Una breve explicacin de las razones que justifican en el trfico moderno la bsqueda de nuevas frmulas de
garanta puede verse en: NEZ ZORRILLA, M. C., La problemtica actual de las denominadas garantas
independientes o autnomas, Marcial Pons, Madrid, 2001, ps. 15-20.
164
Es decir la relacin entre el garante y el beneficiario desde un punto de vista obligacional es autnoma respecto a
las circunstancias existentes en las relaciones que paralelamente se hubieran constituido entre el ordenante de la
garanta y el beneficiario, y entre el ordenante y el banco. SNCHEZ-CALERO GUILARTE, J., El contrato autnomo de
garanta. Las garantas a primera demanda, Centro de documentacin bancaria y burstil, Madrid, 1995, p. 103 y s.
Sobre la no accesoriedad en el contrato de garanta autnomo a primera demanda: Cfr. CARRASCO PERERA, A.,
"Las nuevas garantas personales: las cartas de patrocinio y las garantas a primer requerimiento", en AA. VV. Tratado
de garantas en la contratacin mercantil., T. I,.,Civitas, Madrid, 1996, p. 695.
165
Por ser la accesoriedad un elemento esencial en todo tipo de garanta, parece oportuno formular la siguiente
dilucidacin. En verdad no existen garantas totalmente independientes, por que una garanta nace para asegurar una
obligacin. Es decir, el concepto mismo de garanta postula el de accesoriedad, por cuanto con este ltimo se alude a
la existencia de algo que se intenta garantizar o convertir en ms seguro, y al que la garanta har constante referencia.
sta es la principal manifestacin de la accesoriedad en cualquier tipo de garanta, y obviamente en las garantas
autnomas. La autonoma se predica desde el punto de vista de la relacin jurdica que liga al deudor principal con el
acreedor, pero no respecto al genrico inters econmico para cuya satisfaccin la garanta es constituida. Cfr. NEZ
ZORRILLA, M. C., La problemtica actual de las denominadas garantas independientes o autnomas, op. cit., p. 94 y
ss.
166
Justamente a causa de su accesoriedad la fianza ya no se adecua a las necesidades actua-les del comercio
internacional. Cfr. ETCHEVERRY, R., Contratos. Parte Especial, 2, op. cit., p. 149 y s.
167
Los garantes profesionales son los primeros interesados en la constitucin de este tipo de garantas. Por la sencilla
razn de que en sus operaciones activas y pasivas, las entidades de crdito desean eliminar los costes de inseguridad
y, correlativamente, los costes de litigiosidad que resultaran de oponer excepciones derivadas de las relaciones
bsicas entre el deudor y el acreedor. El inters lgico del garante profesional no es, por tanto, poder aprovecharse de
las defensas y objeciones que frente al acreedor pudiera utilizar el deudor, sino muy al contrario, desentenderse de
semejantes extremos y pactar con este ltimo que el riesgo de un pago indebido al acreedor repercuta enteramente
sobre el deudor, que no podr oponerle dichas objeciones al garante en va de regreso. De esta forma, el que presta la
garanta desplaza sobre las partes de la relacin bsica no slo el coste de inseguridad (sobre si la prestacin est o
no bien cumplida), sino adems las cargas asociadas a la promocin de un litigio. Cfr. NEZ ZORRILLA, M. C., La
problemtica actual de las denominadas garantas independientes o autnomas, op. cit., p. 16.
168
Incluso antes del comienzo del juicio, por un ejemplo un acreedor afianzado, debe agotar una serie de trmites
previos - obviados tambin en las garantas a primera demanda - que comportan en su conjunto una especie de
calvario procesal para el acreedor. Con esta expresin se resume: la acreditacin del incumplimiento del deudor, la
prueba de su insolvencia, para lo cual ser necesario la excusin de todos sus bienes, o bien la prueba de que carece
de bienes suficientes para el cumplimiento de la obligacin asumida o, en su caso, soportar la oposicin del fiador de
las eventuales excepciones que a su vez le competan al deudor, sea ste simple o solidario. Cfr. Idem, p. 17.
169
Cfr. LORENZETTI, R. L., Tratado de los Contratos, T. III, op. cit., p. 479 y s.
171
Las garantas a primera demanda, 170 los ttulos que se comercializan en bolsa, la
cesin de crdito cuando se pacta la facultad de percepcin directa del crdito, la
prenda cuando existe posibilidad de pactar la compra por el acreedor segn precio
estimado al vencimiento, la transmisin fiduciaria de los bienes en garanta,
constituyen algunos de los ejemplos de funcionamiento de este tipo de garantas
autnomas y autoliquidables. 171 De todos stos, en esta oportunidad se analizar
con ms detalle el fideicomiso de garanta.
El objeto de este trabajo consiste en sealar algunas de las principales ventajas
que ofrece este tipo de garantas. Hacia este cometido, se indaga en qu consiste
la figura y se superan algunas posibles objeciones. 172
II. Fideicomiso de garanta: concepto y caractersticas En principio todo fideicomiso
tiene una funcin de garanta, incluso aqullos denominados de administracin
(12). 173 Esta observacin se explica a la luz del funcionamiento natural de la figura:
para el buen fin del negocio que el fiduciante encarga al fiduciario, el primero
transmite al segundo la propiedad fiduciaria de ciertos bienes y se constituye con
stos un patrimonio especial o de afectacin. 174 A travs de la constitucin de este
patrimonio, de alguna manera se asegura que los bienes se mantendrn afectados
exclusivamente al cumplimiento del encargo, pues resultan "inmunes" a las
170
Las Reglas y Usos Uniformes relativas a las garantas contractuales de 1978, de la Cmara de Comercio
Internacional (CCI) en su introduccin sealan que la garanta a primera demanda es "aquella en la que el pago queda
condicionado nicamente a la existencia de una simple reclamacin escrita del beneficiario". Los nicos
condicionamientos que deber tener en cuenta la citada reclamacin no son estrictamente condiciones impuesta a la
misma, sino los propios trminos conforme con los que se otorg la garanta. As toda reclamacin deber producirse
dentro del plazo de validez fijado para la garanta, siempre que existiera una expresa disposicin al respecto, y
tampoco podr hacerse por un importe superior a la cantidad por la que el banco (garante) se oblig. Como el pago se
produce inmediatamente una vez que el banco garante haya recibido la reclamacin indicada, ests garantas a
primera demanda se denominan tambin garantas automticas - autoliquidables - . El banco no investigar si tal
reclamacin est justificada, sino que proceder al pago y har recaer las consecuencias del mismo sobre el ordenante
de la garanta. Ser a ste a quien corresponder demostrar que el pago obtenido era improcedente y actuar en contra
del beneficiario. Con este orden de ideas el contrato autnomo de garanta a primera demanda ha sido definido en los
siguientes trminos: "es aqul por el que el banco garante se obliga a pagar al beneficiario una cierta cantidad de
dinero, cuando ste notifique a aqul no haber obtenido una determinada prestacin o un cierto resultado econmico
derivado de la relacin jurdica con un tercero". Cfr. SNCHEZ-CALERO GUILARTE, J., El contrato autnomo de
garanta. Las garantas a primera demanda, op. cit., ps. 74 s- 142.
171
Cfr. LORENZETTI, R. L., Tratado de los Contratos, T. III, p. 531. Es preciso aclarar que a pesar de poder incluir
todos estos diferentes negocios en una misma categora, sin embargo el grado de autonoma y de autoliquidacin es
diferente en cada uno.
172
Cabe anticipar que la admisin de la figura no es pacfica en la doctrina jurdica argenti-na. Un sector la califica de
ilegal e innecesaria. Cfr. PERALTA MARISCAL, L., L., "Fideicomiso de Garanta Neuralgias y cefaleas garantizadas!"
en L.L. 2000-D-975.
173
Cfr. CARREGAL, M. A, "Fideicomiso de garanta: lcito y necesario" en L.L. 2000-E-948.
174
La teora del patrimonio afectacin es receptada por nuestro derecho mediante los arts. 14 a 16. de la ley 24.441
que establecen las reglas por las cuales se regir la nueva institucin jurdica. Los bienes fideicomitidos constituyen un
patrimonio separado del patrimonio del fiduciario, del fiduciante y del beneficiario. En la contabilidad del fiduciario, los
bienes integran una simple cuenta de orden, representa una cuenta no patrimonial y no debern confundirse con otros
del fiduciario, ni con aquellos pertenecientes a otros fideicomisos, porque el fiduciario adquiere la propiedad despojada
de su valor econmico. El fiduciario es un simple soporte jurdico de la propiedad. Esto significa ni ms ni menos, que
los bienes fideicomitidos no hacen al fiduciario ni ms rico ni ms pobre, porque el no tiene el valor patrimonial o
econmico. Ahora bien, hay una titularidad formal, una y solo una, el fiduciario es el nico titular del derecho real de
dominio. No se cuestiona la exclusividad de su derecho, el fiduciario no comparte la titularidad de los bienes con nadie.
El beneficiario no tiene ningn derecho real sobre los bienes fideicomitidos, simplemente un derecho personal
protegido por la ley. Este derecho personal, si tiene un contenido econmico, porque cuando el fiduciario le transmita al
beneficiario o fideicomisario los bienes fideicomitidos, ste se enriquecer con ellos. Pero y mientras dura el
fideicomiso la riqueza o el valor econmico de los bienes se encuentra instalada dentro del patrimonio separado,
siendo este conjunto de bienes en definitiva, el que crece o decrece, se valoriza o desvaloriza. Cfr. FREIRE, Bettina V.,
El fideicomiso. Sus proyecciones en los negocios inmobiliarios. Editorial baco de Rodolfo Depalma, Buenos Aires,
1997.
172
acciones de los acreedores personales del fiduciante y del propio fiduciario. As, la
seguridad, la garanta, es un medio, un instrumento para alcanzar el fin querido por
las partes.
Ahora bien, es posible que la garanta sea querida como fin en s mismo y no como
un mero instrumento. Cuando la seguridad constituye la razn de ser de la figura,
se est ante un verdadero Fideicomiso de garanta. En estos casos los bienes
fideicomitidos tienen por finalidad especfica asegurar el cumplimiento de ciertas
obligaciones del deudor fiduciante. De manera que si ste incumple sus
compromisos, el fiduciario puede ejecutar la garanta que constituyen los bienes,
cobrarse su crdito o pagar al respectivo acreedor, y devolver el remanente; 175 en
caso contrario -si el deudor cumple-, el fiduciario devuelve los bienes al fiduciante,
o los transmite a la persona que ste indique. Con este orden de ideas la figura ha
sido definida de la siguiente manera: "Contrato por el cual el fiduciante se obliga a
transferir la propiedad fiduciaria de un bien al fiduciario, con el encargo de que en
el supuesto de incumplimiento de la obligacin del constituyente que se pretende
garantizar, el fiduciario proceda a la venta del bien y entregue el producto obtenido
hasta la concurrencia del crdito al acreedor en cuyo favor se ha constituido,
cancelando as total o parcialmente la deuda impaga". 176
Al comienzo de esta descripcin, se ha dicho que las garantas autnomas, bien
por la falta de accesoriedad, bien porque pueden admitir un proceso de ejecucin
extrajudicial refuerzan en mayor medida el crdito garantizado, todo esto en
comparacin con las garantas tradicionales. En este lugar parece oportu-no
formular una aclaracin respecto al carcter no accesorio del fideicomiso de
garanta.
En principio el deudor fiduciante entrega al fiduciario uno o ms bienes en garanta
de cumplimiento de una obligacin propia. Estos bienes "salen" del patrimonio del
primero y estn "especialmente afectados" a aquel compromiso. Sobre estos
bienes recae la garanta. Econmicamente no contabilizan ni en el patrimonio del
fiduciante, ni en el del fiduciario. 177 Con esta afectacin no se pretende tanto el
aseguramiento incondicional de la obligacin principal, sino la satisfaccin - por la
realizacin de los bienes - de un deber de indemnizacin subsidiario. 178
175
El beneficiario del fideicomiso puede ser el mismo fiduciario u otra persona que designe el fiduciante. En el primer
caso resulta que el fiduciario es el mismo acreedor garantizado; en el segundo, el fiduciario y el acreedor son dos
personas distintas, pero en todo caso el ltimo ser tambin el beneficiario.
176
FREIRE, Bettina V., El fideicomiso. Sus proyecciones en los negocios inmobiliarios. Op. cit., p. 144.
177
Cfr. MOSSET ITURRASPE, J., " Negocio fiduciario con fines de garanta ", en Revista de Derecho Privado y
Comunitario. Garantas, T. II, 1994, ps. 66-70.
178
Frecuentemente la liquidacin de los bienes a que conduce el incumplimiento del deudor, no coincide en especie
con la prestacin garantizada. En efecto, este tipo de garantas es muy propicio para asegurar la realizacin de un
proyecto o de una obra. En verdad en este tipo de operaciones se mira ms que a garantizar en sentido tcnico el
preciso cumplimiento de la obligacin, a asegurar una satisfaccin de los intereses econmicos del beneficiario, cuando
ste quede perjudicado por el incumplimiento del deudor principal. sto se realiza mediante una prestacin
indemnizatoria, que, se presenta as ms que como garanta del crdito, como aseguradora de un inters econmico.
Cfr. NEZ ZORRILLA, M. C., La problemtica actual de las denominadas garantas independientes o autnomas, op.
cit., p. 22.
173
Con relacin a las garantas a primera demanda se ha dicho que el pago de la misma puede tener lugar a partir de
tres solicitudes distintas: a primera demanda pura y simple, a primera demanda justificada, a primera demanda
documentada. Estas formas varan de acuerdo a la mayor exigencia de requisitos formales. Cualquiera de ellas
mantienen sin embargo "la autonoma y falta de accesoriedad de la garanta". En especial interesa subrayar el ltimo
caso por su equiparacin con el fideicomiso de garanta. Cfr. NEZ ZORRILLA, M. C., La problemtica actual de las
denominadas garantas independientes o autnomas, op. cit., p. 28.
180
Se ha dicho en nota 4 que en verdad no existen garantas totalmente independientes. En el fideicomiso de garanta
esto significa que, si bien, ante el incumplimiento del deudor se ejecutan los bienes sin que se discutan cuestiones
derivadas de la relacin subyacente, no obstante, la accesoriedad de la garanta entra en juego para reequilibrar la
situacin jurdica de las partes, en el caso de que el pago recibido por el beneficiario no se encuentre justificado por el
contrato principal. As cuando concurre mala fe en el beneficiario por reclamacin abusiva de ste - o por actuacin
abusiva del mismo fiduciario beneficiario - o cuando la obligacin garantizada resulta ser nula o inexistente, si bien no
se puede detener la ejecucin, aquellas causas pueden hacerse valer como fundamento de una eventual accin de
repeticin. Con lo que, el fiduciante podra repetir del beneficiario - fiduciario o no - lo que se ha cobrado
indebidamente. Sobre la relacin entre autonoma y accesoriedad en la garanta autnoma a primera demanda ver:
NEZ ZORRILLA, M. C., La problemtica actual de las denominadas garantas independientes o autnomas, op. cit.,
p. 94 y ss.
181
Ley N 24.441, B.O. 16/1/95, se conoce por razones polticas ms que jurdicas como Ley para el Financiamiento
de la Vivienda y la Construccin. La finalidad ltima que tuvo en miras el legislador con esta herramienta fue dotar al
ordenamiento jurdico de las herramientas necesarias para poner en marcha un proceso de reactivacin de la
economa a partir de la industria de la construccin. No obstante esta finalidad, la ley alcanza a los bienes muebles, a
pesar de que por su denominacin se pueda pensar que solo se trata de una norma aplicable a los inmuebles. As, por
ejemplo, el fideicomiso funciona tambin con cosas muebles.
182
El silencio constituye en ltima instancia una cuestin de poltica legislativa.
183
de patrocinio y las garantas a primer requerimiento", en AA. VV. Tratado de garantas en la contratacin mercantil., T.
I, . op. cit., ps. 686 y ss.
184
Cfr. Art. 3. Pueden ser fuente del fideicomiso: el contrato y el testamento. No obstante este reconocimiento del
legislador, casi todo el articulado se dedica casi en exclusiva al fi-deicomiso de origen contractual. Esta orientacin
manifiesta la preferencia del legislador. En este sentido: LPEZ DE ZAVALA, F. J., Tratado de los Contratos, T. V,
Zavala, Bs. As., 1995, p. 704.
185
Art. 19 y s.
186
El mbito ms propicio de este garanta son los negocios inmobiliarios. En efecto, la construccin de obras de gran
envergadura requieren en su mayora plazos de duracin relativamente prolongados, cuantiosas inversiones, as como
tambin suponen la contratacin de un buen nmero de personas. Durante estos perodos la inmunizacin a toda
accin ajena a la obra, en la medida que evita el dispendio vano de tiempo y dinero, contribuye a su buen fin. Por eso
de alguna manera el fideicomiso de garanta protege su realizacin.
187
Cfr. CARREGAL, M. A., "Fideicomiso de garanta: lcito y necesario", op. cit. Explicita Carregal que no se trata de
preferir una u otra garanta. Cada cual tiene sus particularidades y segn la caractersticas de los casos convendr uno
u otro tipo. Si lo que se trata de proteger es el proyecto, el fideicomiso de garanta se torna necesario, pues la eventual
ejecucin de hipotecas o embargos ajenos a la relacin de crdito podran frustar el buen fin del negocio.
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Cfr. LORENZETTI, R. L., Tratado de los Contratos, T. III, op. cit.,p. 353 Entre las crticas se dice que no es una
figura contemplada en la ley; que viola el numerus clausus de los derechos reales; que beneficia slo al acreedor; que
la ejecucin extrajudicial viola el derecho de defensa del deudor y menoscaba el derecho de propiedad por lo que la
especie trasgrede la CN, etc. En definitiva se concluye que slo es garanta de neuralgias y cefaleas. Estas objeciones
pueden verse en: PERALTA MARISCAL, L., "Fideicomiso de garanta? Neuralgias y cefaleas garantizadas! op.cit.;
cada una de las crticas han sido respondidas acabadamente por Carregal en el artculo citado en nota 12.
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Cfr. FREIRE, Betina, El fideicomiso. Sus proyecciones en los negocios inmobiliarios., op. cit., p. 147. La autora
citando a Batiza sostiene que han sido aisladas las opiniones en contra de esta forma de fideicomiso y que dicha
posicin es minoritaria en la doctrina.
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Cfr. FREIRE, Betina, El fideicomiso. Sus proyecciones en los negocios inmobiliarios., op. cit., p. 147. La autora
citando a Batiza sostiene que han sido aisladas las opiniones en contra de esta forma de fideicomiso y que dicha
posicin es minoritaria en la doctrina.
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Cfr. idem p. 154. FREIRE considera que en principio el fiduciario no est obligado a realizar consultas previas ni al
fiduciante ni al beneficiario para realizar los actos de disposicin que sean necesarios para concretar los fines del
fideicomiso; sin embargo las partes sobre la base de la autonoma de la voluntad podran pactar algo distinto. Se ha
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dicho en nota 24 que si se ejecutaran los bienes, no obstante la mala fe en el beneficiario, la nulidad o inexistencia de
la obligacin garantizada, estas causas pueden hacerse valer como fundamento de una eventual accin de repeticin.
Es decir, el fiduciante puede repetir del beneficiario - fiduciario o no - lo que ste cobr injustamente.
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Esta obligacin no puede ser dispensada, ni contractualmente ni por disposicin testamentaria y resulta por este
motivo de carcter esencial y primordial. Se ha dicho que de alguna manera esta exigencia desdibuja la "confianza"
que inspira la formalizacin del negocio fiduciario. Cfr. BARBIERI, P., Contratos de empresa, Editorial Universidad, Bs.
As., 1998, p. 124. Pensamos que esta obligacin, lejos de desdibujar la confianza, simplemente la juridiza.
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El art. 82 incorpora tres nuevos incisos -12,13,14- al art. 173 del Cdigo Penal. La finalidad de todos ellos es penar
cualquier abuso en las facultades de quien posea un mejor posicionamiento en la relacin jurdica.
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