La Lectura en La Primera Infancia PDF
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Resumen
En este artculo se aborda la lectura en la primera infancia entendida en un sentido amplio en
el que se leen signos icnicos y lingsticos con la intencin de construir horizontes de
sentido y significados a travs de la interpretacin y comprensin de los textos. La lectura se
aborda desde la interaccin entre el nio, los adultos que acompaan las narraciones y el
texto. Destacando que la lectura supera la decodificacin para convertirse en un fenmeno en
el cual el sujeto encuentra respuestas a los enigmas, emociones y sentimientos. Por ello
conocer los acercamientos de los nios a los textos permite vislumbrar cmo los educadores
promueven e incentivan el deseo por la lectura y la posibilidad de resignificacin de esta
experiencia.
Palabras claves: Desarrollo del lenguaje, lectura, comprensin, primera infancia y
educadores.
Abstract
This article deals with the reading in early childhood, understood in a broad sense, in which
signs are read iconic and linguistic with the intention of constructing horizons of sense and
meant across the interpretation and comprehension of the texts The reading is approached
from the interaction between the child, the adults who accompany the stories and the text.
Emphasizing that the reading exceeds the decoding to become a phenomenon in which the
subject finds answers
to
the riddles, emotions and
feelings.
Therefore
recognize children's approaches to texts provide
a
glimpse how educators
promote and encourage the desire for reading and the possibility of new meaning from this
experience.
Keywords: language development, reading comprehension, early childhood and educators.
Carlos Alberto Ramrez Norea estudiante del Programa de Psicologa, Facultad de Ciencias
Humanas, Sociales y de la Educacin de la Universidad Catlica de Pereira y asistente del Grupo de
Investigacin Cognicin, Educacin y Formacin, lnea de Investigacin Cognicin y Cultura de la
misma Universidad; este artculo es una modalidad de trabajo de grado para optar al ttulo de
Psiclogo.
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Diana De Castro Daza, Magster en Psicologa, Docente del Programa de Psicologa y coordinadora
del Grupo de Investigacin Cognicin, Educacin y Formacin de la Universidad Catlica de Pereira;
directora del trabajo de grado.
Introduccin
Este artculo tiene como objetivo realizar un recorrido conceptual con la intencin de
reflexionar sobre la lectura en la primera infancia, vislumbrando como propsito general
resaltar que los encuentros significativos con la lectura influyen en la posicin del sujeto
frente a esta actividad. Resaltando que son los educadores quienes pueden potenciar el
aprendizaje y el sentido que otorgar el nio al encuentro con los textos, entendiendo el
concepto de educadores como aquellas personas que posibilitan la formacin en el proceso y
desarrollo de la competencia lectora, entre los cuales se puede destacar padres, hermanos,
cuidadores o pares que se encuentren ms capacitados. En esta va la pregunta que pretende
responder el articulo es Cmo entender y abordar la lectura en la primera infancia?
Con el objetivo de responder a este interrogante, en primer lugar, se plantea una
reflexin sobre las caractersticas de la primera infancia desde Puche et al (2009), Castaeda
y Mina (2006), quienes ubican una serie de momentos que marcan el desarrollo de las
competencias y el aprendizaje, estableciendo cronolgicamente el periodo que se entiende
por primera infancia. Asimismo se abre una disertacin sobre la aparicin de la lectura,
entendida como una instancia que prosigue la inmersin del sujeto en el mundo simblico
que en algn momento empieza a ser dominada por la palabra, dando origen a una nueva
manera de relacionarse y comprender el entorno, lo cual aparece como un reflejo de los
hechos histricos y culturales que traen consigo los adultos o pares que acompaan el
encuentro y significacin de la realidad (Vigotsky, 1982).
En segundo lugar, se establece el concepto de lectura en la primera infancia como un
proceso que es desarrollado desde los primeros momentos de interaccin del nio con sus
progenitores, vislumbrando un consenso regido por el lenguaje que permite expresar y leer
los estados de nimo o los sentimientos, situacin que abre la posibilidad para relacionarse
con los dems, construyendo escenarios y modos de entender los elementos que aparecen en
la cultura y en el sentir de cada sujeto. De forma similar se muestra la importancia del vnculo
que se construye con los adultos o pares para encontrarse de una manera significativa con el
mundo de la lectura (Reyes, 1999, Duran, 2002 y Jolibert, 2010).
Por ltimo, en el tercer apartado se muestra la importancia de la lectura de textos
apoyados en signos icnicos y lingsticos que son narrados por los educadores de una forma
intencionada y provocadora, que a su vez permite acercar al nio a la lectura como un modo
de encontrarse con el conocimiento. Para ello se muestra como la lectura
en primera
instancia deviene de las narraciones hechas por los educadores para luego convertirse en un
fenmeno de carcter autnomo, situacin que marca un nuevo camino para encontrarse con
la lectura pero que siempre estar impregnado por las voces, las huellas y las primeras
experiencias que dan a conocer los adultos (Meja, 2010, Egan, 1991, Ong, 1988 y Chambers,
1991).
De esta manera, desde el desarrollo conceptual que se propone en este artculo, la lectura
implica una modalidad amplia que est en relacin con un proceso que permite buscar y
ofrecer sentido a las voces, eventos, objetos, signos lingsticos e icnicos y dinmicas que
subyacen a la realidad, asimismo se resalta que es un encuentro que permite construir
significacin a los textos y de forma semejante a la existencia. Por lo tanto, la lectura es un
proceso interactivo que permite construir sentido desde las diferentes modalidades que
emergen del lenguaje dando la posibilidad de transformar y producir conocimiento.
La primera infancia
La primera infancia es considerada por Castaeda y Mina (2006) como la etapa del
ciclo vital que comprende el desarrollo de los nios desde su gestacin hasta los 6 aos de
vida (p. 33). Siendo necesario mencionar que existen una serie de periodos en los cuales las
competencias marcan su aparicin de acuerdo a los diferentes momentos del desarrollo y los
procesos de aprendizaje de los nios. Estableciendo estos periodos de la siguiente manera.
De los 0 a los 2 aos es un periodo en el cual el aprendizaje de los nios est mediado
por la interaccin con la familia, de los 3 a los 4 aos se considera una etapa de iniciacin de
la socializacin secundaria en la cual empieza a generar un encuentro fuera del ncleo
familiar que aporta nuevos elementos al desarrollo y a la produccin de conocimiento.
Seguidamente se establece la etapa de los 4 a los 6 aos en la cual los conocimientos se
empiezan a impartir de un modo ms estructurado, haciendo referencia al ingreso del nio a
un sistema educativo, hablando especficamente del ciclo de transicin anterior al primer
grado escolar, en el cual aparece el encuentro directo con los aspectos formales del cdigo
escrito.
Asimismo, es necesario reconocer las capacidades de los nios y las tendencias en los
momentos del desarrollo, lo que no implica una homogeneidad en los sujetos; la psicologa
del desarrollo cognitivo ha identificado diferentes trayectorias en la construccin del
conocimiento lo que da cuenta de las particularidades y diversidad de los sujetos (MEN,
Puche, Orozco, Orozco, Correa, 2009). Destacando que el desarrollo est inscrito en una
dinmica que
ligado, abre horizontes de conocimiento hacia una nueva perspectiva de los hechos que
emergen de la realidad, por lo cual, el nio puede hacer parte activa de la interaccin,
construccin y transformacin de los hechos que lo ataen.
Por ello, es fundamental mencionar que no se puede reducir
la lectura a una
alfabetizacin mecnica, pues esta condicin confronta los deseos y expectativas del nio con
las exigencias, arbitrariedades y convenciones del lenguaje escrito. Por ello, el acercamiento
a la lectura debe estar impregnado de encuentros mediados, estratgicamente establecidos y
fundamentalmente afectuosos que abran la posibilidad de visualizar mundos posibles y
fantasiosos con los cuales el nio disfrute y construya un deseo permanente frente a la
lectura, en el que intervienen diferentes tipos de signos que permitan develar los textos y sus
contenidos para incorporar la lectura como una instancia que lleva al conocimiento y por
tanto a la posibilidad de comprender la realidad.
La lectura en la primera infancia
En relacin a lo que se viene planteando se puede establecer que el desarrollo de la lectura en
la primera infancia posee unas connotaciones particulares, inscritas en una dinmica en la
cual los educadores son la fuente para que el nio se vincule de una manera apropiada y
apasionante en este campo.
Cabe sealar que en este artculo, educador se refiere a las personas que le facilitan al
nio la construccin de herramientas para acercarse y comprender los textos escritos u orales
que vehiculan en nuestra cotidianidad. Estos adultos significativos cercanos al nio,
representan el bagaje cultural y las convenciones sociales que constituyen un medio para
acercarse a los textos y abrir la posibilidad de significarlos.
De esta manera, el trmino de educador se refiere estrictamente a las personas que
facilitan y ofrecen experiencias significativas a los nios a travs del lenguaje, lo que en
las
caractersticas de los textos, por ejemplo, la organizacin gramatical y sintctica, los tipos de
textos y la estructuracin de los gneros discursivos, la intencin en el discurso, entre otros.
De esta manera, Reyes (1999) denomina lo que hasta el momento se ha venido
mencionando como un proceso que hace parte de una primera etapa que acerca al nio a las
dinmicas de la lectura, lo cual est estrechamente relacionada con la mediacin de padres o
cuidadores que traen consigo la posibilidad de construir y fortalecer el sentido de la lectura,
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siendo los adultos los encargados de impartir estas primeras nociones sobre lo que representa
leer.
Para ello es imprescindible ofrecer una amplia importancia a la lectura de cuentos
infantiles y a toda actividad que fomente esta competencia, ya que es un fenmeno que
permite acceder a la comprensin del mundo que el nio empieza a descubrir, siendo esto
fundamental pues la lectura aparece en un contexto familiar y en estrecha relacin con padres
y cuidadores, espacio en el que los nios no abordan la lectura desde los principios
normativos y convencionales, sino ms bien asientan nociones y afectos para abordarlos
cuando la sociedad se los exija.
Es as que leer antes de poder realizar una lectura autnoma o en palabras de Vasco
(2010) leer sin saber leer es el camino que permite al sujeto encontrar en la lectura un
espacio en el cual no slo puede aprender, sino que es una fuente que permite disfrutar
trasegando por ideas, historias y mundos fantstico que dan otra nocin de lo que cada uno
en un determinado momento llamar su realidad o que tambin podr posibilitar en algunos
casos la configuracin y transformacin de la identidad del lector, que vienen desde la voces
de los textos y las narraciones hechas por las personas que acompaan el proceso de lectura.
Destacando que la identidad en el ser humano se construye y reconstruye entre otros
espacios, en el proceso de reflexionar y debatir con los textos y extraer de sus contenidos
elementos que orientan al nio hacia diferentes emociones y sentimientos, situacin que
permite abrir el camino para erigir y transformar su existencia y por ende el vnculo con la
realidad. De esta manera, Larrosa (1996) concibe que:
la aventura de la autointerpretacin es interminable y conducir a donde no estaba
previsto, a la conciencia de que el yo no es sino una contina creacin, un perpetuo
devenir, una permanente metamorfosis. Y esta metamorfosis tendr su arranque y
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De acuerdo con esto, es posible mencionar otra de las funciones indispensables que el
nio alcanzar con la ayuda y atencin de un adulto o par ms capacitado, esta funcin se
refiriere a la imaginacin, entendida como la capacidad que adquiere un sujeto para
representar situaciones que un signo icnico o lingstico no muestran explcitamente, sin
embargo es posible realizar una representacin mental que interrelaciona conocimientos y
vivencias los cuales permiten dar cuenta de nuevas situaciones que no estn evidenciadas en
una escena, dibujo o de manera alfabtica.
Por ello Duran (2002) manifiesta que a la hora de ofrecer un libro a un nio se debe
hacer de una forma especial, ya que no se puede creer que las imgenes y los colores
llamativos son suficientes y pertinentes para dar a conocer o imaginar la realidad, la cual trae
consigo una infinidad y variedad de mensajes, por ello un libro para nios debe poseer desde
los colores ms llamativos y resplandecientes hasta los ms oscuros y rsticos, pues en la
cotidianidad ellos aparecen con mucha frecuencia.
As mismo, las imgenes o temticas deben mostrar como en el transcurso de la vida se
sufren altibajos, evidenciados en emociones tales como la felicidad, la ira, la tristeza y el
miedo, siendo estados que son inherentes al ser humano por lo tanto aparecen y desaparecen
constantemente, por ello es indispensable desde la primera infancia conocerlos para aprender
a controlarlos (Reyes, 1999).
Por ello, el reconocimiento de las diferentes caractersticas y tonalidades en un libro,
pueden ser la primera experiencia para mostrar que la realidad est sumergida en mltiples
matices que permean y afectan al sujeto en el transcurso de sus vivencias, por tanto es
indispensable estimular la imaginacin del nio con la intencin que recree y anticipe
mundos posibles y fenmenos que slo mediante sta competencia podr experimentar.
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De esta forma, es necesario aclarar que todo lo que se viene mencionando es posible
entenderlo como lectura, puesto que el desarrollo de estas actividades est vinculada en una
instancia que pretende primero comprender mltiples eventos, que incluyen percepciones de
la vida cotidiana, narraciones, signos icnicos y lingsticos que necesariamente son dotados
de sentido para configurar su pertinencia y utilidad en la construccin e interaccin con la
realidad.
Para argumentar lo que se ha venido mencionando Jolibert (2010) plantea que la lectura
es un fenmeno que debe ser considerado desde el inicio en relacin a la compresin, referida
desde un aspecto situacional, por lo que se puede entender este concepto de manera amplia
siendo fundamental el acompaamiento y dinmica que ofrecen los adultos educadores, pues
ellos contribuyen a que los nios puedan entender y comprender los diferentes eventos y
situaciones que subyacen en la realidad, llegando a la posibilidad de construir y transformar
activamente el conocimiento.
En esta va Jolibert (2010) propone que leer es una condicin que se realiza mediante una
amplia gama de procesos cognitivos, lo cual permite inferir que es una actividad
que
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agradable, con la intencin de mostrar al nio la infinidad de elementos que trae consigo la
lectura.
Lo cual es importante realizarlo para mostrar y recrear escenarios insospechados o como
lo menciona Pineda (2007) la lectura a los nios les hablan de mundos ya no existentes, o
incluso inexistentes, de mundos posibles que ellos pueden explorar por medio de su
imaginacin (p. 14) siendo importante resaltar, que el acercamiento a la lectura en la primera
infancia est estrechamente ligado a los proceso de comprensin, que en ltimas lleva al nio
a entrar en dialogo con diversos pensamientos y emociones que lo introducen en la
posibilidad interactuar con el conocimiento que aparece en la realidad, lo que configura
formas de sentir y pensar.
El trnsito de la lectura hacia un proceso ms autnomo
Los nios antes de la apropiacin del cdigo escrito se encuentran con un proceso de
lectura acompaado por personas significativas que develan en forma de narraciones lo que
viene impreso en los textos, en este proceso los nios avanzan hacia una lectura autnoma
que se entiende como la posibilidad que tiene el sujeto de encontrar independientemente el
valor del signo y su mensaje, lo cual se da mediante el desciframiento de la representacin
convencional.
Es necesario mencionar que el proceso que vive un sujeto en el encuentro con la lectura
en la primera infancia, se halla impregnado por varios elementos que constituyen por
naturaleza un trnsito que siendo bien abordado, puede ser un factor que contribuya en gran
medida al aprendizaje de la lectura autnoma, es decir, espacios significativos, planificados y
socializados de una manera eficaz, posibilitan que el nio se encuentre en una mayor
disposicin para aprehender la lectura de cdigos escritos, buscando el sentido de los textos y
por tanto su comprensin.
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Al respecto conviene decir que el trnsito que se nombra en este apartado da cuenta de la
necesidad de brindar una profunda atencin en la vinculacin del nio frente a las diferentes
modalidades de la lectura, pues es desde la primera infancia que se configura lo que Meja
citando a Ferreiro (S.F) denomina como la conciencia del lector siendo este aspecto el que
permite al sujeto buscar y encontrar respuestas en la lectura a los interrogantes que emergen
en su pensamiento. En el mismo sentido Meja (2010) establece que:
Un buen inicio para la lectura son los libros ilustrados, complementados con una
buena narracin en las que se le d a las palabras el tono, la cadencia y en donde se le
d a la voz las inflexiones correspondientes a su mensaje y significado (p. 879).
Componente que se convierte en un constituyente elemental para formar sujetos
comprometidos con la interpretacin, comprensin y reflexin de los sucesos que emergen en
relacin a los diferentes textos abordados y de los significados que all se pueden construir,
mediante el dilogo con las personas que en un principio abren la puertas para adentrarse en
la lectura y en sus encantos.
En otro orden de ideas, conviene decir con base en Egan (1991) que el lenguaje escrito
es un proceso de gran complejidad, el cual en su gnesis filogentica y ontogentica est
estructurado en relacin a los sonidos, as lo plantea Egan cuando establece Pero slo
escribimos smbolos diseados para representar los sonidos de las palabras que significan
cosas ( p. 60) esto es un proceso que se consolida en relacin con la aparicin de los
pictogramas que pretende representar los sonidos que dan cuenta de los objetos, de esta forma
se pasa a la invencin de los smbolos como fuente escrita para representar las palabras
emitidas.
Dentro de este contexto, se puede mencionar que fue el ingenio humano el que posibilit
la construccin de smbolos que permiten dar cuenta de las slabas como un elemento
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esencial del cdigo escrito, depurado en relacin a las consonantes y las vocales que
conforman la estructura de las palabras como fuente de significados. Situacin que permite
nombrar y acceder al mundo mediante un sistema de signos estructurado que culturalmente
dio paso a un aprendizaje ms fcil y claro de la lectura y por supuesto de la escritura (Egan,
1991).
Lo expuesto desde Egan, es fundamental pues reconoce el desarrollo del lenguaje en
relacin a los sonidos, Egan lo plantea diciendo De qu estn formadas las palabras?
Solemos
decir
que
de
letras.
Pero
estn
constituidas
por
sonidos.
Decimos
convencionalmente que escribimos cosas. Pero slo escribimos smbolos diseados para
representar los sonidos de las palabras que significan cosas (1991, p. 60). Es decir, que el
acercamiento que tiene un sujeto al mundo de la lectura aparece en primera instancia
vinculado la expresin estructurada de sonidos que convierten este fenmeno en historias,
poemas, rondas, cuentos o simplemente palabras que paulatinamente se convierte en un
proceso que muestra una forma de conocer e interactuar con la realidad, fuente esencial para
impulsar los encuentros con la lectura, encontrando en esta va la posibilidad de explorar
mundos maravillosos. As los adultos que acompaan al nio ofrecen la posibilidad de traer
la narracin como una forma para aproximar al sujeto a un sistema que mediante la
comprensin posibilita traer en la vida del nio formas de entenderse a s mismo y de
participar en el escenario social.
Por consiguiente, la narracin debe ser vista como un instrumento que permite incentivar
al sujeto a un encuentro con las palabras que paulatinamente fascinan el mundo del nio al
dotar de nuevos significados los acontecimientos y vivencias que aparecen en el medio que
est explorando. As la narracin aparece como una condicin transformadora, pues ella
muestra desde tempranos momentos la posibilidad de acercar, interpretar y comprender las
complejidades de la realidad.
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aparece
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Conclusin
Se puede decir, basndose en Duran (2002) que la lectura supera la modalidad de leer textos
escritos, este planteamiento atribuye que leer est relacionado con la comunicacin y la
comprensin de los mltiples mensajes que aparecen en la cotidianidad. De ah que la lectura
se encuentre en todos los procesos que involucren informacin, expresin de ideas,
sentimientos o de sucesos, resaltando que no slo se lee lo escrito, sino las expresiones
humanas, los signos icnicos y lingsticos los cuales traen consigo un significado y por ende
una intencin comunicativa. Lo cual revela que el significado de los textos no simplemente se
extrae de la decodificacin de signos, sino que se convierte en un fenmeno de interaccin
entre el lector y cualquier tipo de texto.
As que ensear el valor de la lectura desde la primera infancia es fundamental, pues
se sostiene la idea que existen mltiples modalidades de lectura, siendo necesario realizar una
aproximacin a ella desde una edad temprana, con la firme conviccin de configurar en el
nio el deseo y entusiasmo para abordar la lectura como un fenmeno que ofrece la
posibilidad de encontrarse y transformarse continuamente, en el que las palabras son el
rumbo para construir y reconstruir la vida, esto de acuerdo a las exigencias del entorno.
Finalmente lo que se puede dimensionar luego de haber trasegado por la lectura en la
primera infancia, es reconocer la prioridad de mostrar en los primeros momentos de vida, a la
lectura como un mecanismo que permite develar la inmensidad que propone el mundo
simblico, en palabras de Reyes (2005) la posibilidad de pasar de un lenguaje utilitario e
instrumental a uno interpretativo, expresivo y simblico resulta determinante en el
desarrollo de la capacidad creadora de un sujeto y que garantiza el trnsito desde la lectura
literal hacia la lectura como proceso dinmico de construccin de sentido (p. 10) con lo que
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de una manera consciente, que posibilite ser ms que un espectador de la vida un generador
de conocimiento, creador de cambios y mundos posibles.
Por ello, debemos reflexionar sobre la puesta en marcha de los espacios pedaggicos que
ofrecen los cuidadores y agentes educativos para dar a conocer la lectura, en lo que se torna
fundamental concebir el proceso de lectura como la posibilidad de dar sentido a un texto
ligado a un intercambio de informacin, puesto que el texto posee una serie de mensajes que
son analizados e interpretados por el lector dando pie a la significacin y resignificacin
constante de estos mensajes, lo cual da origen a descubrir y actualizar diferentes ideas de un
mismo escrito cada vez que se vuelva a l, es una relacin en la que se destaca que el dialogo
que entabla el nio con el texto, se convierte en la puerta de entrada para los procesos de
significacin, los cuales se realizan desde la experiencia, relaciones e historia del sujeto que
coloca a la interpretacin y comprensin como un fenmeno que se establece desde
diferentes puntos de vista, siendo la lectura un proceso que permite despertar nuevas
emociones e ideas para afrontar la realidad y transformar continuamente al propio sujeto.
Entonces lo que se propone hacer desde un inicio con la lectura es mostrar al sujeto
los mundos posibles, agradables y desagradables que vienen impresos en la relacin que se
estructura con los cuidadores y los escenarios que all se propician, lo cual permite reconocer
un panorama sobre lo que es la vida, pues mediante la exposicin y trabajo consensuado con
los nios se puede construir escenarios significativos en los cuales ellos pongan en marcha la
competencia lectora, inscrita en la posibilidad de comprender el contexto y lo que deviene de
l.
Entendiendo una vez ms que leer no simplemente da cuenta, de conocer los signos
convencionales instaurados y reconocidos por la cultura, sino ms bien de la significacin
que podamos hacer desde la lectura a la vida, abriendo la posibilidad a una participacin
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Referencias
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de Colombia para la primera infancia. Bogot: ICBF.
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Egan. K. (1991). La forma Narrativa y la comprensin del significado (pp. 93-120). En la
comprensin de la realidad en la educacin infantil y primaria. Madrid: Ediciones
Morata S.A.
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Reyes. Y (1999). Animacin a la lectura y literatura infantil y juvenil. Trabajo presentado en
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