El Universo Del Español Bonaerense Lucía Escriche
El Universo Del Español Bonaerense Lucía Escriche
El Universo Del Español Bonaerense Lucía Escriche
EL UNIVERSO
DEL ESPAOL BONAERENSE
EN CLASE DE ELE
Universidad de Barcelona
Junio de 2012
AGRADECIMIENTOS:
NDICE
1. Introduccin .......................................................................................................... 7
2. El habla dialectal ................................................................................................. 11
3. La geografa en el mundo hispnico................................................................... 15
4. La historia del espaol......................................................................................... 15
5. La sociedad en Amrica....................................................................................... 19
6. Situacin lingstica en Hispanoamrica ........................................................... 21
6.1 El espaol en Amrica ............................................................................ 21
6.2 Contacto lingstico entre el espaol
y las lenguas amerindias......................................................................... 22
7. Divisin dialectal del espaol en Amrica .......................................................... 26
8. El espaol bonaerense ......................................................................................... 27
8.1 Situacin lingstica de Argentina......................................................... 28
8.2 Localizacin geogrfica de Argentina ................................................... 32
8.3 Historia y sociedad de Argentina .......................................................... 33
8.3.1 Inmigracin masiva en Argentina ................................................ 38
8.4 El espaol bonaerense: una modalidad muy particular ..................... 39
8.5 Caractersticas generales del espaol bonaerense ............................... 43
8.5.1 Plano fnico..................................................................................... 44
8.5.2 Plano gramatical ............................................................................. 45
8.5.3 Plano lxico ..................................................................................... 49
8.5.3.1 Vocabulario de origen hispnico ......................................... 49
8.5.3.2 Vocabulario procedente de otras lenguas europeas ............. 50
8.5.3.3 Vocabulario de origen indgena o africano.......................... 50
8.5.3.4 Lenguaje popular y expresiones idiomticas ....................... 51
8.6 La literatura bonaerense .......................................................................... 52
9. La variacin diastrtica ......................................................................................... 55
10. La variacin diafsica ......................................................................................... 60
10.1 El registro coloquial ............................................................................. 62
11. Lengua oral y lengua escrita ............................................................................... 64
12. La importancia de la pragmtica en la eleccin del lenguaje ........................... 68
12.1Mximas de cooperacin ........................................................................ 70
12.2Teora de la relevancia ........................................................................... 70
12.3El principio de cortesa........................................................................... 71
12.4La atenuacin .......................................................................................... 72
1. Introduccin
El presente trabajo pretende realizar un estudio de la variedad lingstica de Buenos
Aires, modelo irradiador de lengua en Argentina, dentro de un contexto de enseanza de
espaol para extranjeros.
La razn principal que nos mueve a ello se basa en que el estudio de una lengua
extranjera se enriquece cuando aumentan las posibilidades de acceso del estudiante a un
mayor nmero de modalidades de una misma lengua. Es posible que el estudiante no
viaje al pas donde aparece esta variedad de lengua. Sin embargo, cada vez ms, debido
a este mundo globalizado que nos ha tocado vivir y a la difusin de nuevos medios de
comunicacin, tales como internet, el estudiante puede tener acceso a la variedad
bonaerense a travs de numerosas vas desde cualquier punto del planeta e, incluso,
cabe la posibilidad de que el aprendiente tenga contacto real con un hablante de esta
modalidad lingstica, debido a la creciente movilidad de personas por los distintos
pases del mundo.
Pese a que el estudiante de una lengua extranjera tiene, normalmente, un acceso a la
variedad general o estndar del espaol dentro del aula, lo cierto es que esa variedad
estndar es ficticia, esto es, la delimitacin del espaol estndar se debe a un acuerdo de
adhesiones y exclusiones que influye sobre lo que se debe ensear en el aula de ELE. Sin
embargo, la realidad con la que se va a encontrar el estudiante en el exterior es una
realidad lingstica muy diferente: existe unidad en la diversidad (Moreno Fernndez
2009: 29). Esta constatacin implica que el espaol est conformado por numerosas
variedades que enriquecen la lengua y la llenan de valor patrimonial.
Por otra parte, el alumno comprobar, fuera del aula, que el nivel sociocultural de un
individuo es otro factor extralingstico que influye en la variacin de la lengua, hecho
que constatar el diverso modo de hablar de los miembros de una misma comunidad de
hablantes.
Asimismo, dentro de una variedad regional concreta, el estudiante comprobar que,
motivado por el contexto situacional, el hablante utiliza la lengua de modo diverso
adaptndola a las convenciones sociales de su cultura. Cada comunidad lleva a cabo
estas variaciones de un modo concreto, modo que el estudiante deber aprender para
realizar un uso adecuado de la lengua, ya que el alumno necesita conocer, adems de
ELE
Seguidamente analizaremos la letra de dos piezas musicales que nos ayudarn a conocer
el lenguaje del tango, principalmente, el lunfardo, y, a continuacin, una novela del
siglo XX nos servir como muestra de la riqueza literaria de este pas, adems de ser un
ejemplo ptimo para tener un primer contacto con la lengua literaria de Argentina.
Por ltimo, analizaremos dos conversaciones reales muy diferentes: la primera, dentro
del registro formal del mbito periodstico, y la segunda, una conversacin entre
hablantes con relacin de simetra, esto es, un acto comunicativo entre iguales dentro de
la jerarqua social. Este ltimo anlisis pondr de relieve las diferencias pragmticas y
lingsticas que existen entre los dos contextos situacionales.
Todo ello persigue el objetivo de presentar documentos que podran ser de gran ayuda
al profesor a la hora de introducir la modalidad bonaerense en la clase de espaol para
extranjeros.
10
2. El habla dialectal
En este apartado nos centraremos en estudiar por qu hablamos de variedades del
espaol y qu factores determinan que una lengua se pueda presentar en distintas
modalidades.
Como afirma Francisco Moreno Fernndez (2009), todas las lenguas naturales del
mundo aparecen en distintas manifestaciones debido a varios factores determinantes: la
historia, la geografa, la sociedad y, en menor medida, las situaciones comunicativas. Es
por ello por lo que la lengua espaola tambin experimenta esta situacin de cambio que
origina distintas variedades. Adems, el espaol es la lengua romnica ms hablada en
el planeta, con ms de 400 millones de hablantes nativos, y ocupa la cuarta posicin en
cuanto a la superficie terrestre donde est presente (9,1%), segn Marqus de Tamarn
(citado por Moreno Fernndez 2009: 25). Es fcil deducir que a mayor nmero de
hablantes de una determinada lengua, mayor tendencia a la heterogeneidad. Sin
embargo, segn Moreno Fernndez (2009: 29), las distintas variedades del espaol
forman unidad en la diversidad, esto es, pese a lo extenso del territorio, las diferencias
sociales y el peso de la historia en cada lugar, existe un factor comn que une todas las
variedades. Esto permite que los hablantes de espaol nos podamos comunicar y
entender sea cual sea nuestro origen. No obstante, seguimos hablando de diversidad en
relacin a las variedades geogrficas, tambin llamadas geolectos o dialectos. Cada
dialecto presenta caractersticas propias en cuanto a la pronunciacin o entonacin, el
lxico, la morfologa y la sintaxis.
As pues, los dialectos relacionan unos fenmenos a un rea territorial determinada.
Moreno Fernndez (2009: 32) sostiene que los dialectos son modalidades de la lengua
que se utilizan en un territorio concreto. Pero como esta definicin sera incompleta, el
autor detalla varias caractersticas que han de darse para considerar dialecto una
determinada modalidad: es una variedad de una lengua a la cual est subordinada, suele
estar desprestigiada por la comunidad de hablantes, es utilizada en un territorio siempre
inferior en extensin al de la lengua de la cual deriva y por un menor nmero de
hablantes, y tiene el mismo origen que otras variedades.
Los lmites de los dialectos vienen dados por la aparicin de fenmenos lingsticos
concretos en un espacio determinado. Sin embargo, no es nada fcil establecer dnde
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termina una variedad y dnde comienza la siguiente, ya que cada rasgo lingstico tiene
sus propios lmites geogrficos, los cuales no suelen coincidir con las fronteras
polticas, debido a que las lenguas vivas evolucionan de manera diversa en cada lugar.
Esos lmites que marcan la extensin geogrfica donde aparece un rasgo concreto de la
lengua reciben el nombre de isoglosas.
La idea de si existen o no los dialectos ha estado expuesta a debate continuo, ya que el
trmino dialecto es un concepto complejo y para nada absoluto, y este arduo trabajo se
complica, dado que se refiere a una lengua viva y en continuo cambio, y no a una
ciencia exacta. Ciertas voces han negado la existencia de los dialectos, como es el caso
de Paul Meyer, quien en 1877 explicaba la imposibilidad de fijar lmites a los rasgos
lingsticos, ya que unos rasgos pueden sobrepasar la isoglosa, mientras que otros quiz
no consigan acercarse a dicha frontera imaginaria (mencionado por Moreno Fernndez
2009: 43). La nica justificacin que este autor da a la existencia de los dialectos es que
ello facilita su estudio. Sin embargo, otros autores como Ramn de Andrs defienden la
existencia de los dialectos, afirmando que contamos con justificaciones lingsticas
suficientes pese a que las fronteras geogrficas, lingsticas o temporales son difusas
(citado por Moreno Fernndez 2009: 46).
Entones, cul es la diferencia entre una lengua y un dialecto? Montes Giraldo (1980:
241) manifiesta que dicha discusin resulta principalmente de factores polticos, ya que
la delimitacin de estos conceptos es complicada. Sin embargo, actualmente es aceptada
la idea de un carcter bsicamente dialctico de la lengua, la cual es una abstraccin
cmoda y necesaria, como afirma Montes Giraldo (1980: 241), para organizar un
complejo conjunto de sistemas y subsistemas. La clsica idea de un universalismo
monoltico es rechazada actualmente, ya que una lengua se basa, en su esencia, en un
permanente cambio. Segn Montes Giraldo (1980: 245): La lengua es un conjunto de
variantes o dialectos y por consiguiente todo hablante lo es de un dialecto (o de muchos,
no simultnea sino alternativamente). Dicho autor concluye que para diferenciar
lengua y dialecto, nos tenemos que centrar en un criterio sociopoltico, esto es,
comprobar la existencia de una autonoma o plenitud funcional (lengua) o, por el
contrario, la ausencia o limitacin de ella (dialecto).
Asimismo, Veny (1985: 12), siguiendo la lnea de Coseriu, afirma que todo dialecto es
lengua, un sistema fnico, gramatical y lxico realizable en el hablar, que puede
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Pero, cmo es posible llegar a esta diversa ramificacin lingstica de las lenguas
naturales? Se trata de un asunto relativamente complejo debido a la influencia de los
factores extralingsticos anteriormente mencionados y que a continuacin pasamos a
desarrollar. Los factores son los siguientes:
1) El individuo
2) La geografa
3) La historia
4) El nivel sociocultural
5) El marco situacional
6) El medio oral o escrito
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14
15
XVI.
esencia inicial de koin, nacida con el objetivo de unir, situada fuera de cualquier
ideologa para representar a lo comn, elegida libremente por hablantes de distintas
lenguas, y pasar a ser impuesta, iniciando as su rechazo por parte del resto de personas
que no se sentan identificadas con dicha idea de Estado.
Como apunta Moreno Fernndez (2009: 21), las razones que provocaron que el
castellano se convirtiera en una lengua de prestigio fueron varias: la mayor poblacin en
la pennsula ibrica se concentraba en el reino de Castilla. Adems, Castilla tena costa
en dos mares, lo que le supona un mayor poder econmico. Dicha circunstancia
geogrfica favoreci los avances en navegacin que propiciaron una importante fuerza
naval y la exploracin de las costas occidentales africanas y arribar a las islas Canarias.
La poderosa maquinaria econmica de Castilla form una potente fuerza militar que
conquistaba nuevos territorios. Sevilla era el punto de partida de las relaciones
comerciales de Castilla con el norte de frica, y esta era la ciudad que reciba el oro de
las tierras conquistadas.
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Los siglos XV y XVI fueron cruciales para el afianzamiento de un poderoso imperio y del
prestigio del castellano, la lengua hablada por sus habitantes. La unin de la reina Isabel
de Castilla y Fernando de Aragn en 1469 fue, evidentemente, un hecho que marcara el
devenir del imperio. Sin embargo, no menos importante fue 1492, fecha que cambi el
rumbo de la historia para siempre. En dicho ao, los Reyes Catlicos terminaron de
expulsar a los musulmanes de la pennsula. Por otra parte, su enemistad con dicha
comunidad estaba acrecentada, adems, por la rivalidad comercial que mantenan por el
control de la ruta de las especias, hasta entonces dominada por los musulmanes. Los
Reyes Catlicos decidieron apostar por la propuesta que un navegante genovs con gran
experiencia, Cristbal Coln, les haba hecho mediante la Capitulacin de Santa Fe:
buscar una nueva ruta a oriente por el occidente.
como la llama Lynch (1985: 28), e intent controlar a los criollos mediante un refuerzo
de la administracin que los asfixi a tasas e impuestos (recordemos que la primera
conquista haba buscado el control de los indios); otra razn, responde a que la
navegacin y el comercio transatlntico estaban restringidos a Espaa y, como
17
consecuencia, los americanos se vean forzados a comerciar con las colonias; en tercer
lugar, el poder poltico en Amrica recaa nicamente en los espaoles.
Pese a todos estos factores que perjudicaban a los criollos, haba un elemento en el que
estos superaban a los espaoles: el demogrfico.
Sin embargo, este control frreo de los Borbones fue colapsado cuando en 1808, el
ejrcito de Napolen ocup Espaa. Carlos
IV
abdicar en el hermano del emperador francs, Jos Bonaparte. Esta fue la oportunidad
de oro que aprovecharon los criollos americanos para forzar la autodeterminacin de las
distintas colonias; ellos haban desarrollado un fuerte sentimiento nacionalista,
influenciados, adems, por la independencia de su vecino Estados Unidos y por las
ideas romnticas que venan de Europa. Cada antigua colonia form un pas, ya que
tenan su propia identidad. Adems, la geografa hispanoamericana es muy compleja, lo
que dificultaba la comunicacin y propiciaba el aislamiento: la naturaleza reforz las
divisiones impuestas por el hombre (Lynch 1985: 36).
El siguiente mapa muestra las fechas de la independencia de las colonias americanas:
18
5. La sociedad en Amrica
La sociedad con la que se encontraron los nuevos pobladores en las tierras descubiertas
estaba conformada por una amplia y diversa cantidad de pueblos indgenas que
hablaban cientos de lenguas. Con respecto a las circunstancias de las personas que hasta
all viajaron para buscar una vida mejor, nos encontramos con la misma situacin: una
gran heterogeneidad. La gran mayora de los primeros colonizadores eran de origen
andaluz occidental, los cuales trasvasaron a la zona del Caribe un gran nmero de
fenmenos lingsticos propios de su variedad.
Snchez (2003: 134) seala que la sociedad del Nuevo Mundo estaba integrada por una
base europea trasplantada que se mezclaba con la sociedad indgena y africana
(personas de origen africano llevadas a Amrica como esclavos). La situacin social era
discriminatoria, ya que beneficiaba siempre a la clase privilegiada espaola, a la que
otorgaba la exclusividad del poder. En relacin a los espaoles que llegaron a Amrica,
socialmente se dio una situacin de nivelacin igualitaria hacia arriba (Rosenblat
2002: 43). Esto nos indica que, en general, la sociedad espaola sola alcanzar en
Amrica una situacin social ms favorable de la que haba tenido en Espaa. Adems,
dicho autor resalta el hecho de que tuvo lugar una hidalguizacin general de estos
colonos, es decir, muchos de ellos recibieron ttulos nobiliarios como premio a sus
conquistas, etc., y posean el poder econmico, militar y poltico.
Como podemos comprobar, la estructuracin social que se estableci en Amrica,
debido a sus circunstancias particulares, era de una gran complejidad y nada tena que
ver con el esquema social que Espaa haba experimentado hasta aquel momento. La
sociedad americana tena un carcter estamental y estaba organizada de mayor a menor
estatus de la siguiente manera: a) lite espaola, b) clase media, c) plebe y d) esclavos.
a) La lite espaola estaba conformada por la nobleza, el funcionariado y el sector
ms poderoso del clero.
19
mestizos
(descendientes
de
espaol
indgena),
mulatos
XVI
estaba prohibido
20
formacin de las diferentes variedades del espaol de Amrica: por una parte, es
destacable la llegada de esclavos africanos a las tierras colonizadas como mano de obra;
por otra, es esencial la influencia de las grandes oleadas de inmigrantes,
mayoritariamente europeos, que arribaron a este territorio.
Como afirma Rosenblat (2002: 21), la colonizacin de Amrica era de carcter
principalmente urbano, ya que los encargados de la conquista provenan
mayoritariamente de ciudades espaolas y su objetivo principal tras las ocupaciones era
el de fundar ncleos urbanos. Asimismo, pese a que la Corona dedic grandes esfuerzos
a estimular la salida de agricultores espaoles hacia el Nuevo Mundo, esta llamada no
fue prcticamente seguida, ya fuera por el apego de los labradores a sus tierras o por la
prohibicin de los seores a sus campesinos de abandonar sus labores. Sea como sea, la
llegada de agricultores de las zonas rurales fue escasa y su influencia en el espaol de
Amrica, inferior al de la sociedad urbana. Sin embargo, no podemos obviar otras
circunstancias sociales no menos decisivas que influyen en la variacin dialectal, como
por ejemplo el mayor o menor contacto con los indgenas, con la metrpoli, con las
ciudades virreinales, etc.
Y, cmo no, el proceso de urbanizacin que se dio en Hispanoamrica, acrecentado a
partir de las independencias americanas, fue realmente clave en relacin a la evolucin
de la lengua, ya que all se concentraban hablantes de diferentes variedades del espaol.
21
la pennsula ibrica fue trasplantado a las nuevas tierras descubiertas por parte de
numerosos andaluces en la primera etapa de la colonizacin.
Sin embargo, Torres (2004: 13) afirma que hubo opiniones opuestas como la de Amado
Alonso, quien explic que la base del espaol americano fue la nivelacin realizada
por todos los expedicionarios en sus oleadas sucesivas durante todo el siglo XVI (citado
por Fontanella de Weinberg 1993: 35). Alonso alegaba que la base lingstica en
Amrica est formada por el castellano y sus variedades regionales, defendiendo, as,
una teora poligentica en la que ciertos rasgos presentes en las hablas andaluzas podan
haberse desarrollado en Amrica de forma paralela e independiente.
Ms adelante, autores como Rivarola defienden que en el Nuevo Mundo, las hablas
tradas por espaoles de distintas variedades lingsticas, geogrficas y sociales,
entraron en contacto entre s de forma muy diversa basndose en tres puntos: la
reestructuracin patrimonial en la que las diversas variedades de una lengua entran en
contacto y, por circunstancias diversas, ciertos aspectos lingsticos son seleccionados y
generalizados; la acomodacin del bagaje lxico tradicional a la nueva realidad, ya
sea natural o cultural; y el contacto con los indgenas, que provoc cambios,
regionales principalmente, en la lengua (citado por Torres 2004: 17).
22
23
de papagayo, iguana reptil saurio de gran tamao con una cresta dentada a lo largo del
lomo, macagua rbol de gran altura, de madera blanca, con el corazn oscuro,
utilizada en carpintera, etc.
Asimismo, podemos aadir el tano, variedad del arahuaco, que era hablado en islas
antillanas como Hait, Cuba, Puerto Rico y Jamaica. No lleg a ser lengua general ya
que los espaoles terminaron rpidamente con esta poblacin y su modalidad
lingstica. Sin embargo, los colonizadores adoptaron numerosos trminos tanos, tales
como: aj especie de guindilla, batata tubrculo comestible, maz gramnea de tallo
grueso, que produce mazorcas con granos amarillos, cacique designacin que
aplicaban los tanos a sus seores y jefes guerreros, sabana planicie extensa cubierta
de vegetacin gramnea, a veces con rboles aislados, etc.
Otra gran familia lingstica de Amrica del Sur fue la caribe, que se hablaba en
territorios de Colombia, Venezuela, las Guayanas y Brasil, pero que se haba extendido
por Amrica Central. Los caribes eran guerreros temidos por sus costumbres
antropfagas, hecho que provoc un mnimo contacto lingstico entre el espaol y las
modalidades caribe. Sin embargo, gran cantidad de vocabulario fue adoptada por el
espaol: caribe (= canbal) antropfago, caimn reptil muy parecido al cocodrilo,
piragua embarcacin larga y estrecha, mayor que la canoa, hecha generalmente de una
pieza o con tablas o caas, loro papagayo, butaque, butaco y butaca asiento, etc.
Por otra parte, el nhuatl fue, segn Enguita (2010: 272), el principal vehculo de
comunicacin del imperio azteca, el cual todava es hablado, principalmente en Mxico
y Amrica Central. Unos ejemplos del vocabulario azteca que pas al espaol son los
siguientes: mapache mamfero carnicero, del tamao y aspecto del tejn, de piel de
color gris oscuro, coyote especie de lobo que se cra en Mxico y otros pases de
Amrica, de color gris amarillento, aguacate, cacahuate, cacao, tomate, etc.
Otras lenguas indgenas realmente importantes en Amrica del Sur fueron el quechua y
el aimara. El quechua fue la nica modalidad indgena de Amrica del Sur que
desempe, en la poca precolombina, el papel de una lengua de civilizacin (Enguita
2010: 274). Podemos imaginarnos la importancia de dicha lengua, la cual todava es
hablada por millones de personas en el sur de Colombia, noroeste argentino, algunos
lugares del norte de Chile, adems de Bolivia, Ecuador y Per. Algunos de los trminos
que pasaron a formar parte del espaol son: cancha terreno llano, espacio destinado a
24
25
26
8. El espaol bonaerense
Dado que la variacin dialectal en Hispanoamrica es tan marcada, hemos optado en el
presente trabajo por centrarnos en una variedad ms reducida y abarcable: el espaol de
Buenos Aires o bonaerense, perteneciente a la variedad lingstica de la provincia
argentina de Buenos Aires donde se encuentra la capital del pas. La justificacin de
esta acotacin radica en que dentro del territorio austral existen asimismo diferencias
lingsticas, debido a factores muy diversos de contacto con otros territorios o con
lenguas indgenas, aislamiento, etc., y se presenta complicada la posibilidad de abarcar
en el presente trabajo tan amplia modalidad de lengua como es el espaol austral. Esta
situacin geogrfica influye en la lengua de la zona, por sus contactos con otras
modalidades o con lenguas diferentes, como es el caso del portugus de Brasil, o las
lenguas indgenas que se encuentran dentro de Argentina, rodeada por Chile, Bolivia y
Brasil. Por otra parte, la importancia del habla de Buenos Aires reside en que es la
capital idiomtica del Ro de la Plata, ya que posee influencia lingstica sobre este
territorio. Dicha variedad se generaliza en toda esta zona uniformndose, hecho que se
consigue eliminando y creando (Alonso 1935: 101).
27
bilinge espaol-lengua
Regiones fronterizas con Paraguay y Bolivia, donde tiene lugar el contacto del
espaol con el guaran y el quechua, respectivamente. Las lenguas indgenas son
habladas tanto por indgenas como por criollos en esta zona.
Martnez (2008: 258) realiza un recuento de las lenguas indgenas presentes todava hoy
en el pas, las cuales influyen en el espaol en mayor o menor grado, aunque todas se
encuentran en peligro de extincin: guaran, chiriguano, mby, quichua santiagueo,
toba, pilag, mocov, wich, nivacl, chorote, mapuche y tehuelche. Gracias a
investigaciones recientes, Messineo y Cneo (2006: 9) afirman que se puede agregar a
28
la lista el vilela, lengua que haba sido considerada desaparecida desde la dcada de
1960. A continuacin llevaremos a cabo una breve descripcin de las zonas donde
aparecen dichas lenguas, siguiendo a Martnez (2008: 258-259):
Familia tup-guaran:
Familia mataguaya:
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La supervivencia de estas lenguas est, como afirma Martnez (2008: 272), seriamente
comprometida, debido a razones sociales que tienen que ver con el desprestigio y la
estigmatizacin. Por otra parte, a menudo, la situacin real de los indgenas y su
necesidad de adaptacin al sistema laboral, as como las migraciones de grupos
indgenas a zonas urbanas ms industrializadas del pas, y la inclusin en el sistema
educacional, etc., ha provocado el abandono progresivo de su lengua nativa en favor de
la lengua oficial del pas, con el fin de facilitar sus relaciones sociales e insercin en la
sociedad.
No obstante, desde la reinstauracin de la democracia en 1983, el Estado ha llevado a
cabo polticas que reconocen los derechos de los indgenas, dentro de los cuales est
incluido el derecho a una educacin bilinge. Asimismo, el empeo por mantener las
lenguas y culturas indgenas plasmndolas por escrito ha ido en aumento, debido a que
estas culturas son de tradicin oral y corren el riesgo de perder su patrimonio. Por otra
parte, la supervivencia de una lengua depende en mayor grado de que se mantenga
como lengua nativa de una poblacin (Messineo y Cneo 2005: 9). Sin embargo, en
situaciones escolares de multiculturalidad, los profesores han mostrado una gran
carencia de preparacin en los conocimientos y recursos para transferir los contenidos
curriculares en tales situaciones (Martnez 2008: 257). El nuevo reto es, segn la autora,
conseguir desarrollar mtodos que puedan ayudar a solventar los problemas que pueden
surgir en las escuelas en situacin de bilingismo.
A continuacin presentamos un mapa que muestra cmo estn distribuidas
geogrficamente las lenguas amerindias habladas actualmente en Argentina:
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31
Espaol austral
Atlntico
Litoral
Rioplatense
Bonaerense
32
33
34
PAN
(Partido
UCR
35
CIA
del cono sur durante las dcadas de 1970 y 1980. Estados Unidos se encontraba en una
situacin de anticomunismo radical, y por ello apoy estos regmenes autoritarios. El
Plan Cndor consista en una serie de operaciones de seguimiento, detencin,
desaparicin, asesinato, etc., de toda persona sospechosa de ir en contra del sistema
dictatorial que imperaba en estos pases. La mayora de las personas que fueron vctimas
del Plan Cndor eran susceptibles de ser considerados miembros de la izquierda
(socialistas, comunistas, etc.) contrarios a las dictaduras de estos pases. La CIA colabor
en el seguimiento de estas personas, as como en la instruccin de mtodos de presin
en los interrogatorios, torturas, etc.
36
RAE,
que tiende a subvertir, especialmente el orden pblico. Y para clarificarlo todava ms,
el mismo diccionario define el verbo subvertir del siguiente modo: trastornar, revolver,
destruir, especialmente en lo moral. Ahora s nos podemos hacer una idea de cules
eran las acusaciones vertidas sobre las personas consideradas subversivas por el
gobierno.
El gobierno llev a cabo un terrorismo de estado llamado guerra sucia contra las
personas subversivas: se trataba de una violencia indistinta, que inclua seguimientos,
detenciones y desapariciones ilegales de personas, planes de tortura que podan llegar a
lmites insospechados de crueldad, manipulacin de informacin y un largo etctera de
atentados contra la humanidad. Una vez detenidos los sospechosos, eran recluidos en
Centros clandestinos de detencin (ESMA, Vesubio, etc.), donde eran torturados fsica y
psicolgicamente. Una vez atormentados, los detenidos eran ejecutados y abandonaban
sus cuerpos en fosas comunes, o eran lanzados al ro de la Plata desde aviones militares.
En esta guerra sucia, los nios de las familias subversivas corran distintos tipos de
suerte: cuando los padres eran detenidos y secuestrados o chupados, sus hijos eran
tambin detenidos. Los grupos de tareas o patota instaurados por el gobierno se
dedicaban a repartir a los nios a familias militares, las cuales los inscriban como hijos
propios, borrando cualquier relacin con su familia biolgica. Adems, numerosos
nios eran maltratados delante de sus padres a modo de tortura para sus progenitores.
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Las mujeres detenidas que estaban embarazadas eran obligadas a dar a luz en los centros
de detencin sin apenas asistencia. Sin poder ver a sus hijos ni una sola vez, les eran
arrebatados y nunca ms volvan a saber del paradero de sus criaturas. Como
consecuencia, las familias de los subversivos desaparecidos perdan cualquier tipo de
rastro que les pudiera dar informacin acerca del paradero de sus familiares y la suerte
que estos haban corrido. Fue en 1977 cuando un grupo de madres y abuelas de estos
desaparecidos se agruparon para ayudarse en la bsqueda de sus hijos y nietos, y
llegaron a ser el grupo ms frreo de oposicin al gobierno. Este grupo fue llamado las
madres y abuelas de Plaza de Mayo.
Sin embargo, los problemas del gobierno se agravaron cuando en 1978, Argentina y
Chile entraron en crisis por cuestiones limtrofes y tuvo lugar el Conflicto del Beagle. El
conflicto se prolong hasta que en 1980, el Papa medi y Argentina lo acept. El
declive de esta dictadura militar se inici en 1982, con la Guerra de las Malvinas contra
Gran Bretaa. El 2 de abril de 1982, las tropas argentinas invadieron estas islas. Este fue
el motivo para que la guerra entre ambos pases estallara y dur dos meses, hasta que
Argentina se rindi. El gobierno de Argentina haba reclutado como soldados a jvenes
de zonas pobres del pas sin ninguna preparacin. Este hecho, sumado a las constantes
protestas de la sociedad y a la presin internacional, oblig al gobernante Bignone a
llamar a elecciones en 1983. Este fue el final de la dictadura militar, y el inicio de una
democracia dirigida por el presidente electo Ral Alfonsn, quien juzg a algunos de los
responsables de las atrocidades de la dictadura, y puso en marcha una comisin que se
dedic a la bsqueda de los desaparecidos. Esta fue la ltima dictadura militar que ha
sufrido Argentina. Tras ella, el pas ha vivido en democracia pero todava no ha curado
algunas de las heridas de su pasado reciente.
38
XVIII,
XIX,
Carlos Tejedor, surgi una nueva tendencia, que se repetira en el futuro, al habla con
rasgos populares, ya que en el grupo de resistencia de Buenos Aires se mezclaban
personas de diversos orgenes sociales y, adems, se utilizaba el nivel popular
deliberadamente, con el fin de demostrar que eran el pueblo.
39
40
extendido ya al pas entero. Engels y Kailuweit (2011: 230) explican que dicha
modalidad lingstica nace dentro de un contexto ampliamente heterogneo en relacin
a la mezcla tnica y social y, por lo tanto, es el producto de la hibridacin de diversas
peculiaridades lingsticas llegadas de todas partes. Lo importante, afirman, ya no es
centrarse en el personaje criminal en s, sino en el ambiente social donde dicha jerga se
crea y desarrolla.
Esta jerga pronto se difundi con gran xito entre la gente de las clases baja y mediabaja. Esta aceptacin y asimilacin tan rpida y satisfactoria se debe en gran medida a
que sus vocablos aparecan con frecuencia en las letras del tango, gnero musical
caracterstico de Argentina, y particularmente de Buenos Aires, que surge del mestizaje
de sociedades y culturas que viven en la ciudad a partir del siglo
XIX.
41
Adems del lunfardo, debido a la fuerte inmigracin que recibi Buenos Aires, tambin
se desarroll una jerga italo-hispnica llamada cocoliche que naci en el barrio de Boca.
Sin embargo, esta jerga tuvo menos difusin y fue menos popular que el lunfardo.
Conde (2009) la define de la siguiente manera: un habla de transicin de la que se
sirvieron, en su mayora, los inmigrantes italianos llegados al Ro de la Plata que
intentando expresarse en castellano mezclaban con l sus respectivas lenguas maternas
tanto en el plano lxico como fontico y a veces incluso en el sintctico. Estas hablas
son consideradas de transicin debido a que los inmigrantes se valen de ellas como
puente desde su lengua nativa a la espaola. Debido a ello, el autor explica que no hubo
un solo cocoliche, sino tantos como nmero de hablantes.
Fontanella de Weinberg (1993: 254) afirma que el cocoliche no es una tercera lengua
adems del italiano y el espaol, sino que es una evolucin paulatina de una a otra.
Asimismo, dicha autora rechaza la posibilidad de que esta modalidad sea un pidgin o un
criollo por varias razones: en primer lugar, en las modalidades pidgin, tiene lugar una
simplificacin considerable. Sin embargo, la semejanza entre el italiano y el espaol
permiti mantener la flexin. En segundo lugar, una modalidad criolla surge de dos
modalidades ininteligibles entre s y, como sabemos, este no es el caso. Por ltimo, una
modalidad criolla es acogida por hablantes de ambas lenguas, mientras que el cocoliche
fue nicamente utilizado por hablantes italianos.
El cocoliche no dur ms de dos generaciones debido a que el objetivo de sus hablantes
era precisamente abandonar su lengua nativa y aprender la variedad de prestigio
rioplatense tan pronto como fuera posible, para una pronta integracin en su nueva vida.
Adems del cocoliche de hablantes de origen italiano, la autora Gugenberger (2011:
123) se plantea la posibilidad de que hubiese existido un cocoliche gallego debido a que
la mayora de estos inmigrantes provenan de zonas rurales de Galicia y la mayora eran
monolinges en lengua gallega. Sin embargo, es evidente que la aportacin gallega no
fue lingstica sino de otro tipo, como el espritu de trabajo y esfuerzo. Entonces, a qu
se debe esta situacin lingstica? La autora expone que la lengua gallega estaba mal
vista y considerada rstica tanto en Espaa como en Argentina, por lo que los hablantes
gallegos no deseaban conservarla para evitar ser estigmatizados en su nueva realidad.
Asimismo, el gallego y el espaol son lenguas muy similares, hecho que provoc que la
adaptacin de los hablantes gallegos al espaol fuese sencilla y rpida.
42
XIX
XX
inmigrantes franceses, y esto lo podemos corroborar en las letras de los tangos, donde
aparece gran nmero de palabras galas. Este hecho es consecuencia de la visin que la
poblacin tena sobre Francia, pas que inspiraba en esa poca modernidad y un halo de
intelectualidad que se opona a la visin arcaica y conservadora que los rioplatenses
tenan de los espaoles. Asimismo, la exportacin del tango al Pars de la poca
contribuy a la frecuente aparicin de vocablos franceses en dicho estilo musical. Por
otra parte, es interesante aadir un aspecto que refleja la autora sobre los tangos con
temtica francesa: la frecuente aparicin de la mujer gala. Esto se debe a que el francs
fue el nico grupo inmigrante europeo que lleg al Ro de la Plata con abundante
nmero de mujeres, situacin que las convirti en objeto de deseo del hombre
inmigrante soltero y solitario. La mujer francesa aparece de dos modos diferentes en el
tango: como mujer estilosa deseada y amada, y, por otra parte, como mujer de la calle,
de mala vida, relacionada con la prostitucin. De ah palabras como gigol amante
mantenido por una mujer, madame duea de una casa de citas, boulevard calle,
mich cliente de una prostituta, etc. Sin embargo, dichos usos franceses han
desaparecido prcticamente en la actualidad del habla bonaerense y rioplatense.
Adems, como hemos apuntado previamente, la inmigracin de grupos indgenas del
pas hacia ncleos urbanos en busca de trabajo, sobre todo a Buenos Aires, propici una
situacin lingstica muy variada, donde las lenguas se influenciaban entre s, y el
espaol en esta comunidad iba modelando su gran complejidad.
43
XIX
disponemos a describir las caractersticas lingsticas que aparecen en esta variedad del
espaol ayudados por las aportaciones de la mencionada Fontanella de Weinberg y de
Moreno Fernndez (2009: 355-359). Para facilitar su estudio, analizaremos la lengua en
tres planos principales: fnico, gramatical y lxico.
44
XIX
XX
principalmente.
45
Sujeto
Objeto directo
(acusativo)
Objeto indirecto
(dativo)
Reflejo
Trmino de
complemento
Posesivo
Confianza
VOS
Respeto
USTED
Confianza y respeto
USTEDES
TE
LO/LA
TE
LE
LES
TE
SE
SE
VOS
USTED
USTEDES
TU/TUYO
SU/SUYO
SU/SUYO
LOS/LAS
El pronombre vos proviene del latn, lengua en la que tena la funcin de pronombre de
segunda persona del plural. Hasta el siglo
XVI
XVIII,
49). En zonas tales como el rea rioplatense, dicho sistema se simplific en las dos
formas de tratamiento que hemos abordado anteriormente: vos como forma de
tratamiento informal, y usted para el tratamiento formal.
Fontanella de Weinberg (1972: 75) explica, adems, la falta de oposicin entre
vosotros/ustedes que, como en el resto de Hispanoamrica, est presente en el habla
bonaerense. Dicha situacin provoca la prdida del pronombre de segunda persona del
plural vosotros y su paradigma. Es un fenmeno que acta por omisin, al abandonar el
uso de dicho pronombre y su paradigma.
46
En cuanto al voseo verbal, podemos afirmar que, a nivel general, consiste en el uso
de las desinencias verbales propias de la segunda persona del plural, ms o menos
modificadas, para las formas conjugadas de la segunda persona del singular: t vivs,
vos coms o coms. El paradigma verbal voseante se caracteriza por su complejidad,
pues, por un lado, afecta en distinta medida a cada tiempo verbal y, por otro, las
desinencias varan en funcin de factores geogrficos y sociales, y no todas las formas
estn aceptadas en la norma culta.
Las formas de voseo estn completamente consolidadas en Argentina en todas las clases
sociales. Es por ello por lo que el voseo en este territorio se encuentra en una situacin
muy privilegiada. La modalidad ms generalizada y la que en nuestro trabajo nos ocupa,
ya que est presente en la variedad bonaerense, es la que combina el voseo pronominal
y el verbal: vos llegs. El paradigma verbal propio de la norma culta est constituido
por formas voseantes con reduccin del diptongo en el presente de indicativo (cants,
coms, vivs), por las formas voseantes propias del imperativo (cant, com, viv) y por
formas tuteantes para el resto de los tiempos verbales. En el territorio que utiliza nuestra
modalidad de estudio podemos apreciar que el voseo est presente en todos los registros
y situaciones comunicativas, adems de aparecer en todos los estratos sociales, debido a
que se encuentra completamente normalizado.
Para explicarlo de un modo ms sencillo, la flexin verbal del voseo nicamente difiere
de la del pronombre t en dos tiempos verbales: el presente de indicativo y el
imperativo. Siguen la regla que a continuacin presentaremos tanto los verbos regulares
como los irregulares, ya que en esta flexin, todos ellos se regularizan debido a que
utilizan las formas verbales correspondientes al pronombre de segunda persona del
plural vosotros, las cuales no sufren cambios en la raz, puesto que las modificaciones
ocurren cuando el acento de la palabra recae sobre la raz. El cambio con el que nos
encontramos en el sistema voseante es que dichas formas verbales se encuentran
monoptongadas. Todos los verbos siguen esta regla a excepcin de dos: ser vos sos e
ir vos vas. Retomemos la tabla anterior del sistema voseante pronominal para
incluirle la flexin verbal de presente de indicativo:
Confianza
Respeto
47
Confianza y respeto
Sujeto
Objeto directo
(acusativo)
Objeto indirecto
(dativo)
Reflejo
Trmino de
complemento
Posesivo
VOS
Vos cants
TE
Te llamo
despus
TE
Te doy una flor
TE
Te despiertas
VOS
Vive con vos
TU/TUYO
Es tu libro/el
tuyo
USTED
Usted canta
LO/LA
Lo/la llamo
despus
LE
Le doy una
flor
SE
Se despierta
USTED
Vive con
usted
SU/SUYO
Es su amo/
el suyo
USTEDES
Ustedes cantan
LOS/LAS
Los/las llamo despus
LES
Les doy una flor
SE
Se despiertan
USTEDES
Vive con ustedes
SU/SUYO
Es su padre/el suyo
-ar
cant
-er
-ir
com
ven
48
Con respecto al lxico bonaerense, podemos deducir que es de una gran riqueza y
abundancia, debido a los factores que hemos ido enumerando a lo largo de este trabajo,
como pueden ser los contactos con otras lenguas, la inmigracin de grupos
pertenecientes a distintos lugares y estratos de la pirmide social. Para elaborar una lista
til del lxico de esta regin nos ayudaremos de la recopilacin hecha por Moreno
Fernndez (2009).
El vocabulario dialectal ms significativo de esta modalidad es el siguiente: al pedo
intil; atorrante vago; bancarse soportar; boludo tonto; bombacha braga;
colectivo autobs; bronca enojo; frazada manta; lolas pechos; macana mentira;
macanudo simptico; morocho de pelo negro y piel blanca; pavada tontera; petiso
bajito; pileta piscina; etc.
8.5.3.1 Vocabulario de origen hispnico
Fontanella de Weinberg (2004: 61) afirma que en el rea bonaerense existen numerosos
vocablos originarios del espaol peninsular, los cuales probablemente han desaparecido
en el habla actual de Espaa o tienen un valor semntico diferente. Dichos trminos son
afligir preocupar, lindo hermoso, pollera falda, vidriera escaparate, vereda
acera, etc. El trmino estancia finca rural adapt su significado a la realidad de la
zona y difiere del valor semntico que en Espaa tiene actualmente.
Adems de estos, Enguita (2010: 291) habla de las distintas modalidades hispnicas
que dejaron su huella en el lxico de Amrica. En concreto nos interesamos por las
palabras que aparecen en la variedad de nuestro estudio, pese a no ser exclusivas de
esta: palabras de origen andaluz como pileta pila de cocina, de lavar, salivadera
escupidera, y aade el trmino poncho manta cuadrada de lana con una abertura para
insertar la cabeza, el cual considera que fue introducido a travs del mapuche, pero que
este parece ser que lo adopt de una modalidad andaluza.
Asimismo, dicho autor habla de palabras de origen canario como gofio maz tostado y
molido en polvo, mezclado con azcar; trminos de origen occidental como buraco
agujero, carozo hueso de algunos frutos, etc.
49
En relacin al vocabulario que proviene de otras lenguas europeas, varias fueron las
lenguas de las que se adoptaron trminos, tales como el portugus (mayoritariamente
mediante las relaciones con Brasil), el francs (influyente lengua de cultura en el siglo
XIX)
palabras aparece es, sin duda, el italiano y sus variedades regionales, debido a la gran
inmigracin de la que previamente hemos hablado. Palabras como chau, nono o cucha
son utilizadas continuamente en la actualidad. Con todo, Fontanella de Weinberg (2004:
67) afirma que el campo semntico del italiano que ms vocabulario ha aportado es el
culinario, como ocurre en otros lugares por la expansin mundial de la comida italiana.
Por otra parte, no nos podemos olvidar de la contribucin del lunfardo a esta modalidad
en relacin al lxico, que todava hoy podemos escuchar. A continuacin presentamos
un listado de lunfardismos extrados de los diccionarios de Gobello mencionados
previamente:
Bacn persona adinerada, batir denunciar, biaba paliza, bondi autobs, buln
departamento modesto que generalmente se utilizaba para citas amorosas, cana
polica, catrera cama, cote lado, crepar morir, crosta costra, cufa crcel,
chambergo sombrero, falopa droga, farabute loco, farra fiesta, fato asunto,
hecho, fiaca pereza, gotn tango, grata ladrn, grela mujer, guita dinero,
jermu mujer, laburar trabajar, laburo trabajo, lompa pantaln, mancar fracasar
un robo al ser descubierto el ladrn, manyar comer, mina chica, mionca camin,
mish hombre maduro que paga los favores de una mujer, morfar comer, otario
tonto, pelandrn holgazn, pibe chico, piguyo piojo, portar llevar, posta bueno,
excelente, punga hurto en que se sustrae el botn del bolsillo de la vctima, tasca
bolsillo, vento dinero, yiro prostituta, yurno da, etc.
8.5.3.3 Vocabulario de origen indgena o africano
El lxico indoamericano tiene mayor grado de influencia con quienes mayor contacto
han tenido, afirma Enguita (2010: 291). Esto significa que las hablas populares de las
zonas rurales donde predominaban los trabajadores indios eran las modalidades donde
abundaba el lxico de origen nativo. Hasta la emigracin en masa a los ncleos urbanos,
la presencia de poblacin indgena en las ciudades era escasa y a estas les era ms ajena
la realidad lingstica indgena. Lo mismo ocurri en la zona bonaerense, donde la
50
cultura indgena estaba poco desarrollada, y la vida de los aborgenes era de carcter
nmada. Es por ello por lo que el contacto de los nativos con la poblacin blanca fue
menor, y menor fue tambin el influjo de vocabulario indgena en el habla portea
(Fontanella de Weinberg 2004: 63).
Los trminos indgenas que estn presentes en esta modalidad son los que aparecen en
la mayora de las hablas hispanoamericanas. Gran parte del lxico proviene de las
lenguas amerindias ms importantes, tales como el tano, el nhuatl y el quechua. Del
tano aparecen palabras como batata, cacique, canoa, caoba, hamaca, maz, etc. Del
nhuatl obtenemos trminos tales como chocolate, hule, petaca, tomate, etc. Del
quechua proceden cancha, chacra alquera o granja, cndor, guano tipo de abono,
mate, pampa llanura sin vegetacin arbrea, papa patata, tubrculo, etc.
Con respecto a palabras de origen africano, son escasas en esta modalidad debido a que
la mayora de esclavos se concentraban en zonas de plantaciones o minera. Los escasos
esclavos que residan en esta rea solan integrarse a la vida familiar y, por lo tanto,
fueron paulatinamente perdiendo su lengua nativa. Los trminos de esa procedencia que
aparecen en dicho territorio son generales a toda Hispanoamrica y fueron trados por
otras modalidades de espaol o por otras lenguas. La palabra mucama criada,
tpicamente rioplantense, es de origen africano (Lipski 1996: 188). Dicho vocabulario
consta de palabras ya tan comunes como mambo, conga, rumba, banana y quilombo
lo, prostbulo, el cual afirma Enguita (2010: 285) que parece ser que fue introducido a
travs del portugus de Brasil.
8.5.3.4 Lenguaje popular y expresiones idiomticas en Buenos Aires
Nos ayudaremos de los diccionarios de Gobello para enumerar una pequea cantidad de
vocablos y expresiones que aparecen en el habla coloquial de la sociedad bonaerense:
Bancar soportar, tolerar, farruco espaol, especialmente gallego, gallego espaol,
gavin burlador que seduce a las mujeres, malevo maleante, maula cobarde, patota
conjunto de personas reunidas para algn fin, percanta mujer, amante, pichicho
perro pequeo, piola avispado, pucho residuo, resto, purrete nio, viento
puetazo, viejo/a padre/madre, viyuyo tonto, zonzo tonto, etc.
51
Batir la posta decir la verdad, dar bola prestar atencin, hacer caso, cagar algo
malograr alguna cosa, cagar a trompadas golpear a alguien, estar en pedo estar
ebrio, estar para el crimen ser sexualmente atractivo, pisar el palito caer en una
trampa, ser de fierro ser un buen amigo, ser un copado ser una persona alegre, ser
talentoso tener talento, tener quilombos tener problemas, tener orto tener suerte,
tirar las agujas decir la hora, venirse la maroma presentarse una situacin de riesgo,
etc.
52
XX,
53
XX.
XX
54
autores tan destacados como Ernesto Sbato o Julio Cortzar, con obras tales como
Rayuela, novela en la que aparece gran cantidad de formas coloquiales de Buenos Aires,
La vuelta al da en ochenta mundos, etc. En este periodo literario aparece la temtica
del descubrimiento de la naturaleza americana y del hombre americano, lo sexual, etc.
9. La variacin diastrtica
La variacin sociocultural en la lengua es estudiada por la sociolingstica. Para
clarificar el campo de estudio de dicha disciplina, Lpez Morales (2004: 21) cita a
Labov cuando afirma que la sociolingstica estudia las lenguas, tanto diacrnica como
sincrnicamente, pero en su contexto social; por lo tanto, podemos afirmar que estudia
la lengua, pero focalizada en los usuarios. Segn Lpez Morales (2004: 23), lo que
pretende la sociolingstica es determinar las razones por las que el hablante y su grupo
escogen una variante lingstica concreta; el esfuerzo recae en concretar, adems, si las
razones de tal eleccin son de tipo social, geogrfico o etnogrfico; y, por ltimo,
establecer los factores lingsticos y extralingsticos que provocan el cambio en la
lengua.
Esta disciplina va ms all del estudio de un sistema lingstico y de un hablante ideal,
como lo llama Lpez Morales (2004: 46). El nivel de anlisis de la sociolingstica
reside en el conjunto de factores lingsticos y extralingsticos que influyen en la
competencia sociolingstica de una comunidad de hablantes. Y a qu se refiere con la
competencia sociolingstica? Se trata de un conjunto de reglas, tanto lingsticas como
externas a la lengua. La competencia sociolingstica se adquiere gradualmente a lo
largo de la vida del individuo (Blas Arroyo 2005: 204), y es posible comprobarla en las
interacciones de este. Por otra parte, la competencia comunicativa se refiere al conjunto
de reglas que determinan la conducta lingstica.
Sin embargo, no podemos olvidar que la mayora de los estudios de la sociolingstica
han tenido lugar en grupos sociales de culturas occidentales. Es por ello por lo que la
generalizacin universal de los resultados extrados en los diversos estudios sera caer
en el error, ya que cada sociedad se encuentra estructurada de modo muy diverso y
posee una cultura y unas costumbres caractersticas, debido al distinto modo de
conceptualizar el mundo que tienen los individuos y los grupos a los que pertenecen.
55
Las redes sociales: dicho concepto fue introducido por Milroy y se refiere a
un tipo de mecanismo que establece las distintas relaciones entre sujetos.
Este mecanismo se basa en indicadores de densidad y multiplicidad
(vecindad, parentesco, compaerismo laboral/mismo sexo y amistad) de
estas relaciones sociales. La red podr ser fuerte o laxa dependiendo de los
resultados obtenidos. Con respecto a la lengua, cuanto ms fuerte sea la red,
mayor conformismo y fidelidad a las costumbres del grupo. Por el contrario,
las redes laxas carecen de esa fidelidad local y optan con mayor frecuencia
por la norma ms estndar.
56
57
La variable geogrfica
En dicha variable es relevante la procedencia geogrfica de un individuo, ya que la
dicotoma campo/ciudad es de gran importancia en los estudios sociolingsticos. En las
zonas rurales, los usos lingsticos son ms conservadores debido a las estrechas
relaciones entre los miembros de una misma comunidad. Sin embargo, en las zonas
urbanas, la heterogeneidad de sus miembros es tan amplia, que podemos encontrar
cantidad de variedades de lengua y, como consecuencia, gran diversidad de contactos
lingsticos. En los ncleos urbanos, los barrios influyen en el uso determinado de la
lengua que sus miembros hacen de ella. La procedencia geogrfica y los barrios estn
estrechamente relacionados debido a que, a menudo, los inmigrantes de una misma
procedencia se agrupan en una misma rea urbana.
La teora del dficit de Bernstein (citado por Moreno Fernndez 2005: 63)
Bernstein, un socilogo britnico, afirm mediante esta conocida teora, basndose en
factores como la clase social, la escolaridad, el contexto de los hablantes, etc., que
existen dos tipos de uso de la lengua o cdigos, esto es, dos patrones de comunicacin
que el hablante va desarrollando a lo largo del proceso de socializacin.
- Cdigo elaborado: predomina en las clases medias y presenta las siguientes
caractersticas:
1. Orden gramatical adecuado.
2. Uso de variedad de conjunciones y clusulas subordinadas.
3. Uso frecuente de todo tipo de preposiciones.
4. Uso frecuente del pronombre personal yo.
5. Eleccin cuidada de adjetivos y adverbios.
6. Organizacin adecuada de la informacin.
7. Uso del lenguaje adecuado a una organizacin conceptual compleja.
8. Transmisin explcita de significados.
- Cdigo restringido: es frecuente entre las clases trabajadoras aunque a l tienen acceso
todos los hablantes debido a que es el primer cdigo que todos los individuos adquieren.
Se diferencia del cdigo anterior en los siguientes aspectos:
58
Con respecto a las distintas variedades de una lengua, cuanto mayor es el nivel de habla
de la poblacin, menos diferencias se pueden apreciar entre hablantes de distintas
regiones, como ya afirmaba Alonso (1935: 20). Dicho autor explica que cuanto ms
cultas son las personas de los distintos pases hispanohablantes, ms se aproximan a una
lengua general. Sin embargo, segn Alonso, es en la lengua literaria donde las
diferencias regionales son menos apreciables, ya que la literatura general, debido a su
espritu universal, trata de nivelar las distintas hablas locales.
Segn Alonso (1935: 134), en general, el espaol de Hispanoamrica, en la primera
etapa tras la llegada de los espaoles, avanz en oposicin a la lengua en Espaa: en la
metrpoli crecan las tendencias cultas mientras que en Amrica estas se debilitaban y
las tendencias populares se fortalecan. El autor explica que en Espaa creci el sentido
urbano y corts y, sin embargo, en Amrica se ruralizaron los espaoles. Asimismo,
las expresiones vulgares que en Espaa estaban mal vistas, en Amrica eran expresadas
libremente. Sin embargo, en las tierras conquistadas fueron apareciendo ciudades, hecho
que provoc que, sobre todo a partir de las independencias, las distintas naciones fueran
interesndose por las hablas cultas, a las cuales fueron integrados numerosos
vulgarismos, hecho que ejemplifica el autor con el primer verso del Himno Nacional
argentino: id, mortales, el grito sagrado.
En el caso de Buenos Aires, Alonso (1935: 135) expone que comenz a ser ciudad en la
segunda mitad del siglo
XVIII.
59
60
61
formalidad
exigida
por
la
relacin
formal
informal
(personal:
62
-Relacin de igualdad entre los hablantes. Esta relacin puede ser de dos tipos: social
(por ejemplo, de un mismo estrato sociocultural), y/o funcional (el papel que cada
hablante posee en una determinada situacin). Segn Brown y Gillman (1960), la
relacin de menos poder y ms solidaridad favorece el uso del registro coloquial.
-La relacin vivencial de proximidad: el saber y experiencias compartidos.
-El marco discursivo familiar: lo determina el espacio fsico y la relacin concreta entre
los hablantes con ese lugar.
-La temtica no especializada: el tema tratado es de mbito cotidiano.
El registro coloquial es determinado por ciertas caractersticas bsicas:
-Ausencia de planificacin, lo cual conlleva espontaneidad.
-Finalidad interpersonal, es decir, comunicacin con un objetivo socializador, esto es,
facilitar el contacto social para poder transmitir y perfeccionar ms adelante mensajes
de un contenido ms amplio (funcin ftica del lenguaje).
-Tono informal, el cual es el producto de todas las caractersticas anteriormente
mencionadas.
Llamas (2005) cita a Garrido Rodrguez, quien realiz una propuesta sobre algunos de
los rasgos caractersticos de este tipo de registro basada en los estudios de Briz (1996):
1. Nivel fnico
1.1 alargamiento voclico
1.2 prdida o adicin de sonidos
1.3 recursos para dar nfasis
1.3.1 pronunciacin enftica
1.3.2 pronunciacin marcada
1.3.3 exclamaciones
1.4 sonidos no lingsticos (paralenguaje)
2. Nivel morfosintctico
2.1 conectores pragmticos
2.2 intensificadores
2.3 atenuantes
3. Nivel lxico
2.1 modismos o expresiones hechas
2.2 lenguaje coloquial
63
64
El carcter dialgico del lenguaje oral supone la interconexin real de los interlocutores,
quienes van generando la conversacin en el mismo proceso comunicativo. La
motivacin de dicho proceso comunicativo y el propio texto se gestan en el transcurso
del intercambio verbal, a partir de las respuestas del interlocutor, la entonacin, etc.
En la comunicacin oral se cuenta con apoyos paralingsticos y expresivos paralelos a
los propiamente lingsticos, que otorgan por s mismos significado, aumentando e
incluso matizando lo oral.
El escrito, sin embargo, es un discurso monolgico en el cual el interlocutor est
ausente. Los recursos arriba sealados no estn presentes en el acto comunicativo, que
se produce en tiempos diferentes entre quien escribe y quien lee el texto. No cuentan los
recursos paralingsticos (volumen, calidad de la voz, irona, etc.) propios del lenguaje
oral.
En lo escrito, quien produce el texto tiene motivaciones que no siempre son
coincidentes con las de su posible lector. Cuando hablamos, la comunicacin transcurre
en un conjunto de reacciones encadenadas surgidas en ese mismo proceso discursivo
que van creando y motivando el texto. Damos repuestas a preguntas, estas suscitan
rplicas, explicaciones, derivaciones de lo dicho, se va generando un clima que hace que
la propia comunicacin tome caminos ni siquiera pensados ni previstos de antemano. La
identidad del hablante est presente en la conversacin. La presencia fsica de los
hablantes da informacin sobre cmo es el interlocutor, lo que facilita claves relativas a
cmo podemos y debemos comunicarnos con l.
Chafe (1985) describe las diferencias relacionndolas con los distintos modos de
produccin en los discursos, por ejemplo, hablamos con ms rapidez que escribimos
(citado por Clemente 2008: 80).
En el lenguaje oral los sujetos de la comunicacin comparten el mismo contexto
situacional. En lo escrito este contexto desaparece y, por lo tanto, todo el peso de la
comunicacin recae en el texto mismo, lo que exige que este sea suficientemente
explcito e independiente del contexto para que pueda darse una perfecta comprensin,
ya que la matizacin del mensaje por parte del emisor se hace en este caso imposible.
La lengua escrita ha sido, a lo largo de los aos, un tipo de lengua que ha buscado
conseguir un uso correcto, siempre con fines estticos. En cambio, la lengua oral se
65
LENGUA ORAL
LENGUA ESCRITA
Espontnea y preparada
CANAL auditivo
CANAL visual
Inmediatez comunicativa
Distancia comunicativa
Fugacidad
Permanencia
oyente
Relajacin normativa
Sigue la norma
Sintaxis elaborada
Briz (2010: 24) afirma que un factor predominante para la diferenciacin entre lenguaje
oral y escrito es el contexto en que ambos se producen, aunque a menudo, esa
diferenciacin no es tan clara a simple vista, ya que en determinadas circunstancias, se
suele producir una aproximacin de un tipo de lengua al otro, como afirma Briz: a
veces lo hablado aparece en lo escrito y lo escrito en lo hablado. Sin embargo, dicho
autor aclara que esto solo ocurre aparentemente, ya que la diferencia reside en el medio
o canal de comunicacin, es decir, la expresin puede ser fnica en la lengua oral, y
grfica en la lengua escrita.
66
En el caso de Argentina, Alonso (1935: 70) afirma que el sentido de la dualidad lengua
escrita y lengua oral se ha debilitado notablemente. Dicho autor comenta, por ejemplo,
que en el habla coloquial de toda la poblacin de Argentina hay cultismos. Esto se debe,
segn el autor, a que en la prosa rpida, le es ofrecida al lector una dosis de cultismos
acompaados de vulgarismos que evitan el rechazo por parte de los lectores. Alonso
mantena en su momento que el sentimiento general en Argentina es de rechazo a
cualquier intento por hablar bien y que la lengua oral de Buenos Aires presenta un
desorden intencionado.
Por otra parte, como hemos afirmado previamente, la lengua literaria presenta mnimas
diferencias entre pases hispanohablantes, y es en este estilo en el que aparecen
arcasmos con frecuencia. Segn Alonso (1935: 23), esta eleccin de tales sinnimos se
justifica con la necesidad del buen escritor de esforzarse en poseer el sistema ms
amplio y depurado de formas de emocin. Ciertamente, asimismo aparecen arcasmos
en el lenguaje de escritores masa (como los llama el autor), como el uso de la forma ra
del pretrito: Palos, el puerto de donde Cristbal Coln partiera (Alonso 1935: 53),
debido a un intento de acercamiento a la lengua literaria. Es cierto, explica el autor, que
la lengua escrita que ms abunda en Buenos Aires difiere de la lengua general. No
obstante, esto ocurre debido al uso difuso que la mayora de los redactores hacen de
expresiones lingsticas de buenos escritores hispanohablantes.
Esta opinin es actualmente de inters bsicamente histrico, debido a que, con respecto
a la dualidad oral/escrito, en palabras de Havelock (1998: 25): entre ellas hay una
relacin de tensin creativa recproca. Esa tensin se evidencia en determinadas pocas
enfatizando una u otra, pero solo hay que mirar a los medios de transmisin cultural y a
los medios actuales de comunicacin para ver que ambas son dos formas tanto de
expresin y comprensin como de comunicacin que se complementan.
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El filsofo John Searle continu en la lnea de estudio de Austin. Sin embargo, Searle
desarroll dicho estudio con aportaciones como la diferenciacin de los actos de habla
en:
a) Actos de habla directos: el hablante desea comunicar el significado literal que
las palabras expresan convencionalmente. Existe una relacin directa entre
forma y funcin del lenguaje.
b) Actos de habla indirectos: el hablante pretende comunicar un significado
diferente al que aparentemente expresan las palabras. El hablante emite ms
informacin de la que expresa. En dicha situacin, el receptor desempea un
papel importante, ya que de l depende extraer la intencin real del hablante.
Dicha funcin la realizar el receptor acudiendo a la informacin compartida por
ambos interlocutores. A partir de ah, el receptor deber inferir la verdadera
intencin del enunciado emitido por el hablante.
Reyes (1996: 19) ejemplifica este tipo de actos de habla con un uso muy
frecuente en la conversacin: la irona. Dicha autora extrae una frase del famoso
cmic argentino Mafalda, en el cual Mafalda, la nia protagonista, exclama a su
madre: Qu rica sopa!. Debido al conocimiento compartido de las
interlocutoras, que ambas son conocedoras de que a la hija no le gusta la sopa y
su ms que probable expresin de disgusto en la cara, la madre interpreta
fcilmente que la nia est expresando justo lo contrario al significado literal
que sus palabras emiten.
Los hablantes utilizamos el lenguaje en las conversaciones segn nuestro propio inters,
esto es, cuando emitimos enunciados, estos han sido previamente seleccionados segn
nuestra estrategia comunicativa. Con el fin de que la conversacin sea efectiva, los
interlocutores en una conversacin comunican cooperativamente y negocian
estratgicamente una intencin con otra, como afirma Briz (2010: 44).
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71
Adems, dicho autor refleja algunas de las principales funciones de la atenuacin, tales
como hacer el mensaje menos brusco, restar importancia, mitigar, reparar u ocultar la
verdadera intencin. El hablante reduce la fuerza ilocutiva mediante la expresin de
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12.5. La intensificacin
Este mecanismo lingstico aparece con gran frecuencia en la conversacin coloquial,
ya que, como afirma Briz (2010: 114), esta es esencialmente afectiva y enftica. Dicho
mecanismo es un procedimiento por el cual se intensifica algo en la conversacin y se
aumenta el nivel de expresividad de algo, actuando en diferentes niveles como el
sintctico, morfolgico, lxico, etc.
La intensificacin es utilizada por el hablante ya sea para reforzar la veracidad de la
argumentacin, para valorar, para persuadir, recriminar, para buscar el acuerdo o el
desacuerdo, etc. Estos valores asociados a dicho mecanismo son utilizados para apoyar
la consecucin del fin comunicativo del emisor.
Briz (2010: 127) afirma que podemos conseguir la intensificacin mediante la
manipulacin de:
a) Lo dicho, esto es, el contenido proposicional y conceptual, situndose en el nivel
del enunciado, modificadores semntico-pragmticos;
b) El decir, la fuerza ilocutiva de un acto o la presencia de los participantes en la
enunciacin, situndose en el nivel de la enunciacin, modificadores
pragmticos.
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Algunos de los marcadores del discurso que aparecen con frecuencia en Argentina son:
bueno conector pragmtico que a menudo funciona como marcador de apertura y de
cierre de la conversacin; y conector utilizado en mltiples ocasiones en Argentina,
por ejemplo, como marca de inicio de una respuesta; o sea marcador del discurso que
indica el inicio de una reformulacin; viste? marcador que busca el mantenimiento
del contacto con el interlocutor, tpico de Argentina, as como sabs? o entends?;
dale venga, vale, vamos marcador de aprobacin, etc.
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Anlisis prctico
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ELE
ELE,
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vemos indispensable mostrar a los alumnos las estrategias pragmticas que se dan
ELE
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solo conocer la historia reciente argentina, sino, ante todo, tomar contacto con el habla
de ese pas, y ms concretamente, de su capital Buenos Aires. Por tanto, orientaremos
dicho largometraje hacia el plano de la comprensin histrica y lingstica; ambos
asuntos se facilitarn previamente mediante una contextualizacin histrica y una
presentacin terica de la variedad lingstica que nos ocupa.
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tenan un objetivo claro: obligar al detenido a responder a las preguntas que le eran
planteadas; dar informacin sobre sus actividades polticas de oposicin, delatar a
compaeros, lderes sociales o polticos, etc.
Asimismo, la amiga explica a Alicia lo que los responsables de estos centros hacan con
los nios: al chico se lo daban a esas familias que los compran sin preguntar de dnde
vienen. En este momento descubrimos que Alicia es estril, y su amiga le plantea que
Gabi podra ser una de esas nias adoptadas por simpatizantes del rgimen. Alicia se
apresura a preguntar a su marido cmo fue la adopcin de su hija, pero este evade el
interrogatorio.
Seguidamente, la profesora lleva a cabo una bsqueda de las races de su hija, pero tanto
la iglesia como el hospital evitan ayudarle. En un momento en que Alicia se confiesa
con un sacerdote, esta le pregunta: usted sabe la verdad, padre, por qu no me la dice?
(57:46). Pese a la insistencia de la protagonista, el clrigo nicamente le explica que
Gabi le fue dada por Dios, y que por tanto no la rechace. En cuanto al hospital, la
secretaria que la atiende evita proporcionarle ningn dato del registro perteneciente al
parto de su hija. Sin embargo, una seora que escucha sus peticiones se ofrece a
ayudarla, ya que ella est buscando a sus familiares desaparecidos. En ese momento,
Alicia tuvo conocimiento de la existencia de las Madres de Plaza de Mayo. Unos das
ms tarde, una abuela de Plaza de Mayo ve a la hija de Alicia. Al ver a la nia,
reconoci que era su nieta, que haba desaparecido junto a sus padres en una detencin
haca varios aos. Busca a Alicia, se lo explica y lleva a la profesora a plantearse
devolver a Gabi a su abuela biolgica, ya que su historia le haba conmovido.
Durante esos das de cambios en la vida de la protagonista, Alicia descubre que su
marido tiene negocios con el gobierno. Es como si una venda que tapaba sus ojos se
hubiese cado para que Alicia descubriera la verdad de su realidad, que era muy
diferente a la que ella haba credo vivir hasta el momento. Sus estudiantes tambin
haban contribuido a ello, ya que denunciaban en clase las injusticias que estaban
ocurriendo en el pas, con actos como el de empapelar la clase con recortes de fotos de
personas desaparecidas, injusticias que posteriormente ella pudo comprobar.
Un da que ella visita a su marido en la oficina, observa una tortura fsica que estaban
aplicando a un trabajador que haba llevado la contraria a sus jefes. Asimismo, en una
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ocasin visita los lugares donde las subversivas detenidas daban a luz a sus hijos que
posteriormente les seran arrebatados.
Por otra parte, adems de Anita, de sus propios alumnos y de las abuelas de plaza de
mayo, otros dos personajes del mundo de Alicia contribuyen al descubrimiento de la
verdad: el profesor de literatura, de ideas progresistas, y su suegro. El primero intenta,
mediante este dilogo, abrirle los ojos sobre lo que est ocurriendo en el pas (1:19:44):
Anita: Muchas explosiones por todos lados, no? Qu ha pasado? Parece que todo se
viniera abajo.
Profesor: Y se viene abajo, se viene abajo.
Anita: S?
Profesor: Pero no crea que todo eh? No hay que hacerse ilusiones tampoco.
Asimismo, su suegro, un espaol republicano exiliado, a travs de comentarios sobre su
hijo Roberto, le descubre la verdadera situacin sobre la posicin que este ocupa en la
sociedad bonaerense, con estas palabras: los nicos ladrones no son los que aparecen
en la tele (1:04:37), lo que me gusta es tener la conciencia en paz (1:04:46), todo el
pas se fue para abajo. Solamente los hijos de puta, los ladrones, los cmplices y el
mayor de mis hijos se fueron parriba (1:09:43).
Finalmente, debido a que la profesora toma conciencia de su realidad y la de su pas,
decide informar a su marido de que Gabi ha sido encontrada por su verdadera familia.
Esta escena es la ltima del largometraje, en la que podemos observar que el marido le
agrede de una manera terrible, presa del pnico debido a que todo su mundo se est
viniendo abajo. Como consecuencia, Alicia se va de la casa.
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El final de esta pelcula lo considero una metfora que refleja el final de la dictadura
militar. El marido de Alicia representa el rgimen decadente cuyos cimientos se hunden.
Es un sistema que est agonizando y quemando sus ltimos cartuchos. La acomodada
vida del empresario se viene abajo y es abandonado, como le ocurrir a la dictadura
argentina.
El ttulo es muy significativo, ya que la profesora ensea la historia de Argentina
oficial, y no la real. Como un alumno le apunt en clase: la historia la escribieron los
asesinos y la historia no es solo la que aparece en los libros. Podemos comprobar
que Alicia cambia de opinin, ya que le asigna a este alumno un sobresaliente en su
examen. Este ttulo hace referencia, adems, a la estricta censura que llevaron a cabo los
gobernantes, quemando innumerables libros que eran considerados subversivos, y
promocionando, sin embargo, los libros de ideologa nazi. La censura lleg al punto de
secuestrar y hacer desaparecer estudiantes de secundaria en la ciudad de La Plata en
1976, en la conocida como noche de los lpices.
Un smbolo de la pelcula, que marca la evolucin de Alicia en su descubrimiento sobre
la realidad que la rodea, es utilizar cambios en su imagen, en su pelo. Una vez la
protagonista va descubriendo que la historia oficial que le haban contado no se ajusta a
la historia real, se suelta el pelo, como smbolo de modernidad y liberacin, hecho del
que se dan cuenta tanto su marido como el profesor de literatura, cuya perplejidad
resumimos en estos dos fragmentos:
(1:15:54):
Roberto: yo creo que Andrada nos va a largar a todos duros. A todos menos al yanqui,
claro, que debe ser su socio.
Alicia: Eh? Que no te entiendo, qu pasa?
Roberto: Eso digo yo, qu pasa ltimamente con tu pelo?
(1:18:55):
Profesor: Te queda bien el pelo suelto eh?
Alicia:S? Parezco una loca.
Profesor: Ser que a m me gustan locas.
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Otro asunto que cabe destacar es el uso del pretrito perfecto simple en lugar del
compuesto para hechos recientes:
Alicia: En eso es igual que el marido ah? Vos viste que le empieza diciendo pavadas
pero mirando con esa cara de a ver quin me contradice y lo echo, y claro como ella no
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Alicia: Vos viste que le empieza diciendo pavadas pero mirando con esa cara de a ver
quin me contradice y lo echo, y claro, como ella no puede echar a nadie ms que a la
mucama, se entretiene retorcindonos las tripas a todos. (17:50)
Roberto: Est todo en orden eh? La nena duerme, la mucama duerme, t tranquila.
(1:34:45)
Heladera
(nevera):
Cuado:
Che,
Alicia,
hay
ms
cocas
en
la
heladera?(43:10)
Anglicismos:
Coloquialismos:
Pibe (chico), afanar(se) (robar): Cuado: Y esta otra guerra, la guerra que
ganaste vos con los de tu bando, quin la perdi?Sabs quin la perdi,
hermano? Los pibes, los pibes como los mos, porque ellos van a pagar los
dlares que se afanaron. (1:11:07)
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Lolas (pechos):
Esposa: Sabes que yo me siento un poquitodesnuda? Y qu? Dale, no me
vas a mirar las lolas? Como cuando ramos novios.
Romn: Cuando ramos novios me pedas que te mirara los ojos, no te
acords? (15:25)
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R: Qu importancia tiene?
A: Mucha importancia, escuchame, si se lo garch cagaste, eh?
R: Y si se enamor nada ms?
A: Y la cagaste tambin.
R: Entonces es lo mismo, Qu importancia puede tener? (01:05:05)
Graciela: Gas 240, prepaga social 310 y con la luz nos mataron, 720.
Aquiles: Insisto, en los entretiempos del bsquet hay que apagar la luz.
G: S, pero nadie me da bola. (16:24)
Orto (posaderas):
Graciela: Sabs qu, Romn? Le voy a poner punto final a la relacin con este
sorete*, que se meta la alianza en el orto. (34:48)
* sorete aparecer explicado ms adelante.
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Lunfardismos:
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te tengo, boludo! Te puedo contar cmo vas a dejar a tu novia con el bombo
porque te crees muy piola para ponerte un forro. O no? (46:33)
Chorro (ladrn):
Romn: Vos ests loco si penss que la gente va a querer disolver el club.
Banquero: Llam una asamblea y escuch lo que dice la gente, la gente quiere
trabajo, don Aquiles, yo estoy dispuesto a ayudar, ahora, si no me dan una
mano
Romn: Por qu no uss la que tens en la lata?
Banquero: Me ests diciendo chorro a m?
R: No te ofendas.
B: A m me ests diciendo chorro? (01:16:33)
Afanar (robar):
Graciela: Bueno, cest tout. Es todo, muchachos.
Personaje1: Ac hay un paquetito ms.
Graciela: Dame.
Don Aquiles: Y la gente quiere, quiere, pero no puede, no puede.
Graciela: Voy a llevar esto a la caja fuerte.
Personaje 1: Ac?
Graciela: S, no lo voy a llevar al banco, a ver si nos lo afanan. (01:27:50)
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96
DE 1917 A 1935
A PARTIR DE 1935
Abandono y traicin
Desencuentro afectivo
La mujer querida
El hombre
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Con la introduccin de los tangos en las emisoras de radio, los compositores se ven
obligados a eliminar los lunfardismos y regionalismos de sus letras con el fin de
hacerlas ms comerciales y acceder a un pblico mayor.
Seguidamente nos vamos a centrar en dos obras de dos grandes de la msica argentina:
Edmundo Rivero y Carlos Gardel:
ELE,
en Buenos Aires.
Milonga
lunfarda.
La
podemos
encontrar
en
el
siguiente
sitio
web:
http://www.youtube.com/watch?v=3LvC4FVXpr8
Seguidamente, presentaremos el famoso tango de Carlos Gardel, Mano a mano,
grabado por primera vez en 1923. Este cantante de tangos, el ms conocido nacional e
internacionalmente, es considerado el fundador del tango-cancin debido a su grabacin
a principios del siglo
XX
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Milonga lunfarda
Edmundo Rivero
El tordo es algn doctor,
En este hermoso pas
que es mi tierra, la Argentina,
la mujer es una mina
el estao un mostrador
donde un curda se emborracha;
y el fuelle es un bandonen.
El vigilante, un botn;
te la das de sobrador.
La polica, la cana;
El que roba es el que afana;
y apoliyar es dormirse.
Si pelechaste, tens;
El cotorro es el lugar
La vecina es la fulana,
99
Estos son los equivalentes sinnmicos de todos los lunfardismos que aparecen en esta
milonga:
Mina: mujer
Acamalar: ahorrar
Fuelle: bandonen
Fulana: vecina
Botn: vigilante
Tordo: doctor
Cana: Polica
Afanar: robar
Curda: borracho
Chorro: ladrn
Chabn: tonto
responsabilidades
Rana: vivo
situacin
de
una
Batir: decir
Laburar: trabajar
Al vesre: al revs
Mishiadura: miseria
Pelechar: progresar
Fulero: feo
Catrera: cama
Apoliyar: dormir
pobre
lugar
Chapar: agarrar
Relojear: observar
Junar: mirar
Parla: habla
buena vida
letra.
de un peso
Notas:
compositor.
Roberto Grela (1913-1992), compositor y el mayor guitarrista que ha dado el
tango (Garca Martos 2011).
100
Mano a mano
Letra: Celedonio Esteban Flores
Msica: Carlos Gardel y Jos Francisco Razzano
Rechiflao en mi tristeza
te evoco y veo que has sido
en mi pobre vida paria
solo una buena mujer.
Tu presencia de bacana
puso calor en mi nido
fuiste buena consecuente
y yo s que me has querido
como no quisiste a nadie
como no podrs querer.
101
Estos son los trminos lunfardos que aparecen en el tango Mano a mano, destacados
en el texto anterior con negrita:
Rechiflao: ido
Bacana: persona con dinero que vive una vida lujosa.
Remanye: calar a una persona, conocer sus cualidades o intenciones (en desuso).
Percanta: mujer (en desuso).
Gambetear: esquivar, evitar.
Mate: la cabeza, la mente de una persona.
Morlacos: pesos (moneda argentina) (en desuso).
Otario: tonto, alude a la otraria, gnero de focas que simboliza al tonto.
Gavin: burlador que seduce a las mujeres (en desuso).
Bacn: hombre con dinero que mantiene a la mujer.
Acamalar: mantener, ahorrar.
Cafishio: vividor, proxeneta.
Voseo pronominal:
-
Hoy sos toda una bacana segunda persona del singular del presente
de indicativo del verbo ser.
Hoy tens el mate lleno segunda persona del singular del presente
de indicativo del verbo tener.
lo que hacs y lo que hars segunda persona del singular del presente
de indicativo del verbo hacer.
100
102
si preciss un amigo
El tema principal de este tango se basa en la tristeza del cantante, ya que su mina,
originaria del mismo barrio humilde que el protagonista, ha abandonado su vida sencilla
por una vida bacana, donde ha encontrado riquezas y un mundo lleno de
posibilidades. Este ascenso social lo ha conseguido gracias al bacn que la acamala,
esto es, al hombre adinerado que la mantiene. El futuro que augura a la mujer no es muy
esperanzador, ya que el enamorado cantante piensa que va a terminar sin esperanza y
carente de la belleza que ahora luce. Sin embargo, pese a la rabia y el despecho que
siente ahora el protagonista, este no duda en ofrecerle su ayuda ya que siempre la
querr. Podemos llegar a sentir, escuchando este tango, la desesperacin y desconsuelo
que sufre el autor, ya que, como afirmbamos previamente, la carga emocional de los
tangos es intensa, obtenida mediante la implicacin del cantante en las palabras que
dice.
hispanoamericana
en
general,
ha
103
I
Bastar decir que soy Juan Pablo Castel, el pintor que mat a Mara Iribarne;
supongo que el proceso est en el recuerdo de todos y que no se necesitan mayores
explicaciones sobre mi persona.
Aunque ni el diablo sabe qu es lo que ha de recordar la gente, ni por qu. En
realidad, siempre he pensado que no hay memoria colectiva, lo que quiz sea una
forma de defensa de la especie humana. La frase "todo tiempo pasado fue mejor" no
indica que antes sucedieran menos cosas malas, sino que felizmente la gente las
echa en el olvido. Desde luego, semejante frase no tiene validez universal; yo, por
ejemplo, me caracterizo por recordar preferentemente los hechos malos y, as, casi
podra decir que "todo tiempo pasado fue peor", si no fuera porque el presente me
parece tan horrible como el pasado; recuerdo tantas calamidades, tantos rostros
cnicos y crueles, tantas malas acciones, que la memoria es para m como la temerosa
luz que alumbra un srdido museo de la vergenza. Cuntas veces he quedado
aplastado durante horas, en un rincn oscuro del taller, despus de leer una noticia en
la seccin policial! Pero la verdad es que no siempre lo ms vergonzoso de la raza
humana aparece all; hasta cierto punto, los criminales son gente ms limpia, ms
inofensiva; esta afirmacin no la hago porque yo mismo haya matado a un ser humano:
es una honesta y profunda conviccin. Un individuo es pernicioso? Pues se lo liquida
y se acab. Eso es lo que yo llamo una buena accin. Piensen cunto peor es para la
sociedad que ese individuo siga destilando su veneno y que en vez de eliminarlo se
104
Sin duda, esta experiencia literaria ser, para el lector, intensa debido a la carga
psicolgica del protagonista, a sus sentimientos y pensamientos sobre la existencia y
sobre uno mismo, todo ello, mediante un lenguaje impecable y un estilo grandilocuente:
vivir consiste en construir futuros recuerdos (pg. 62). Como el lector podr
comprobar, las variedades regionales en el estilo literario a menudo desaparecen,
debido, como mencionbamos previamente, al espritu universal de la literatura. No
obstante, el escritor literario utiliza con frecuencia el registro coloquial con fines
diversos, bien debido a que el autor refleja el estilo directo del habla de los personajes, o
bien como estrategia para obtener un acercamiento al lector y complicidad con este, etc.
Sin embargo, el registro lingstico del que el autor se sirve en El tnel, es un estilo
formal que no presenta apenas coloquialismos y que, como consecuencia, se acerca ms
al lenguaje general.
Debido al estilo literario, la novela est repleta de figuras retricas tales como
metforas, smiles y anttesis, que enriquecen considerablemente el texto. Unos
ejemplos de dichos recursos seran los siguientes:
La llegada de la carta fue como la salida del sol. Pero este sol era un sol negro,
un sol nocturno (pg. 62).
105
106
de sus obras. Una caracterstica relevante de esta conversacin se basa en una gran
planificacin, debido a que la autora de las preguntas explica que el entrevistado pidi,
previamente y por escrito, las preguntas que le iban a ser realizadas. Esta caracterstica
del lenguaje escrito permiti al escritor preparar sus preguntas, hecho que evitar los
rasgos propios de la conversacin coloquial (repeticiones, expresiones dubitativas,
reformulacin, etc.). Por otra parte, al tratarse de una conversacin formal con ausencia
de confianza entre los interlocutores, el extracto carece de vocablos familiares y
regionales, hecho que provoca un estilo completamente formal y propio de hablantes
con un alto grado de formacin y control de la lengua.
Leamos, pues, parte del relato de esta entrevista por parte de la escritora y periodista
chilena Allende, extrada del sitio web: http://www.letras.s5.com/sabato130303.htm:
Hablando sobre su obra, Sbato dice que considera que el libro ms logrado es
"Sobre Hroes y Tumbas".
-Es la obra en que intento dar una versin total de mi realidad. De toda mi realidad.
Sobre hroes y tumbas, sobre esperanzas y desesperanzas, sobre la vida y la muerte,
sobre el bien y el mal.
... A pesar de que muchas partes del libro son bastante oscuras y rebuscadas, se han
editado 200.000 ejemplares. El autor piensa que su mensaje ha llegado a todo el
mundo.
... -Creo que el gran pblico puede entenderla, aunque en diferentes planos y
profundidades.
... Alejandra, la herona del libro, que ya puede considerarse un personaje clsico de
la literatura, es un engendro de la realidad y la fantasa. Sbato la copi de ninguna
mujer en especial y de todas en general.
... -Ibsen deca que todos los personajes haban salido de su corazn. Flaubert dijo
"Madame de Bovary soy yo mismo". Todos los personajes centrales de una novela
son mscaras de diversos fantasmas que viven en lo ms profundo de nuestro ser. El
adolescente, el viejo, el intelectual, el artista, el ngel, el demonio. Todo sale de all.
Tambin Alejandra. Sobre todo Alejandra. Es uno de los personajes que quizs ms
me representa.
... -Y Bruno y Fernando Vidal?
... -Tambin, claro. Pero Bruno es apenas el emanado de mis mejores sentimientos,
que son los menos.
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(27) -To: Y mira, estuvimos un par de meses, no te sabra decir cuntos. Pero lleg un
(28) momento que ya no lo hicimos ms.
(29) -Yo: Por qu?
(30) -To: El que te dije que estaba entre nosotros se fue por ah con mi mejor amigo,
(31) no s a dnde, y das despus me entero de que fue secuestrado, y bueh, el resto,
(32) ya se sabe...
(33) -Yo: Qu? Lo mataron? O no sabs si sigue vivo?
(34) -To: S, lo mataron, hace poco fui a la casa donde viva y nos juntbamos, fue
(35) muy duro para m, estuve un largo tiempo llorando.
(36) -Yo: Mmmhh, me imagino, tu mejor amigo... y despus de que no protestaron ms,
(37) Qu hacan?
(38) -To: Nada, se fue cada uno por separado y nos olvidamos. Sinceramente, no s
(39) qu les pudo haber pasado, porque seguamos siendo perseguidos...
(40) -Yo: A vos despus de dejar de andar haciendo quilombo, te seguan
(41) persiguiendo?
(42) -To: S, muchsimo tiempo, los abuelos tenan la florera, ah, en la Avenida
(43) Roca, viste? todos los das haba un Falcn verde estacionado afuera viendo a ver
(44) qu pasaba.
(45) -Yo: No te puedo creer, qu sensacin ms fea!
(46) -To: S, la verdad que s, tu abuela no saba qu hacer, porque todos los santos
(47) das, ah estacionado el Ford...
(48) -Yo: Y vos qu hacas?
(49) -To: Yo viva en el Barrio Las Vias, ah donde te junts siempre con tus amigos.
(50) No s cmo, pero no saban que viva all.
(51) -Yo: Ahhh posta me decs? Ni enterado... Y, pero, qu te quedaste ah hasta que
(52) pas todo?
(53) -To: No, hubo un momento que se enteraron que viva ah, era un domingo, y
(54) estbamos almorzando, se escuchan unos gritos y tu to Rubn sali afuera a ver
(55) qu pasaba, pelotudo, el abuelo sali atrs a correrlo y vio a los milicos que
(56) estaban cagando a palos a uno de mis vecinos. Rubn se qued pasmado, tu abuelo
(57) le grit, RUBN VEN ADENTRO PELOTUDO, cuando vena corriendo
(58) entraron a la casa y se escuch un estruendo, no de arma, sino de un golpe muy
(59) fuerte. Esperamos unas cuantas horas adentro en silencio. Abrimos la puerta y
(60) haba una bayoneta clavada... En ese momento dije, suficiente, no voy a poner en
(61) peligro a mi familia solo por mi...
(62) -Yo: (Mirando as O_O) Y qu hiciste?
(63) -To: Agarr el auto y me fui con tu ta a Brasil, a alguna embajada a pedir asilo
111
(64) poltico. Tambin estbamos siendo perseguidos ah, me acuerdo que paramos
(65) y a unas cuadras haba un Ford verde... Estuvimos unos cuantos das. Encontr la
(66) embajada de Suecia y ped asilo poltico. En cuestin de das me lo dieron.
(67) Y bueno, ah la ta ya lo tena a Nico (mi primo de ahora 37 aos) as que hicimos
(68) los bolsos y nos fuimos all...
(69) -Yo: Y no pas nada ms?
(70) -To: No por suerte no, fue todo muy tranquilo, trabajaba de ingeniero civil,
(71) ganaba muy bien, hablaba con la abuela viendo cmo estaba la situacin, me dijo
(72) que todo se haba tranquilizado. Que el Ford verde ya no estaba todos los das y
(73) que todo estaba cesando, que todo se estaba, alivianando, por as decirlo.
(74) -Yo: Ahh, mejor.
(75) -To: S la verdad que s, y cuando me enter que todo haba pasado me qued un
(76) par de aos ms, pero al tiempo volv. S de un amigo que tambin estuvo en
(77) Suecia, creo que actualmente est. Y no volvi ms... yo s, no aguanto sin ver a la
(78) familia, as que llegu ac con Flor (Mi prima de 29 aos, la tuvieron en Suecia) y
(79) Nico, y despus lo tuvimos a Julin (Mi primo de 20 aos) y sigui todo bien por
(80) suerte...
(81) -Yo: Ah, genial...
(82) -To: S, semi genial para m, que zaf de puro culo, no sabs lo fea que es la
(83) sensacin de irte a dormir sabiendo que en cualquier momento pueden entrar diez
(84) extraos a tu casa y matarte a vos y a tu familia. Lamentablemente le pas a mi
(85) vecino, fue una noche muy fea, se escuchaban las ametralladoras por todo el barrio
(86) y gritos de la gente. Agradezco a Dios por haberme salvado.
(87) -Yo: (Mirando as O_O de vuelta) No, qu hijos de puta.
(88) -To: S, una manga de hijos de puta, pero bueno, qu le vamos a hacer. Hay que
(89) tratar de no vivir ms el pasado, y vivir ms el presente.
(90) -Yo: La verdad que tens razn. Bueno, gracias por todo to y por contarme un
(91) poco de cmo fue todo...
(92) -To: Cuando quieras Eze, ahora vamos que se enfra el asado.
(93) -Yo: Ja ja ja, dale. (Era domingo de asado).
112
A continuacin presentamos las caractersticas propias del registro coloquial que pueden
aparecer en el espaol de esta variedad:
Aspectos gramaticales:
ac (l. 50 y 78)
Aspectos lxicos:
Lunfardismos:
-
Lenguaje regional:
-
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Aspectos pragmticos:
O sea marcador del discurso que indica el inicio de una reformulacin (l. 6)
Viste? marcador que busca el mantenimiento del contacto con el interlocutor,
tpico de Argentina (l. 43)
-lo mataron? -S, lo mataron discurso ecoico que refuerza lo enunciado por el
interlocutor que realiza la pregunta, esto es, refuerza la respuesta (l. 34-35)
114
-Y qu hiciste?
Solapamiento entre las enunciaciones de los dos hablantes. El interlocutor que
escucha interrumpe al hablante sin haber el emisor concluido su comentario. En
una conversacin es un hecho que ocurre con gran frecuencia y otorga
dinamismo al acto comunicativo (l. 61-62)
-Es curioso que el chico que ha realizado la entrevista, al llevar a cabo la transcripcin,
introdujo comentarios mediante parntesis, con el fin de acercar al lector al contexto
situacional de la conversacin y a las impresiones y sentimientos que provocaban en el
joven las afirmaciones del to. Dichos comentarios contienen grficos puestos de moda
por los adolescentes que se comunican mediante mensajes de texto y las redes sociales,
tan de actualidad ltimamente. Un ejemplo sera el siguiente: (mirando as O_O) (l. 62
y 87), donde el chico muestra mediante tres caracteres (O_O) una expresin de
asombro.
14. Conclusiones
Llegados a este punto, ha transcurrido un largo tiempo desde los inicios de este estudio
y comenzaremos este apartado expresando lo gratificante que ha sido esta experiencia.
Nuestro objetivo principal era el de descubrir al estudiante de lengua extranjera lo
interesante y satisfactoria que resulta conocer otras variedades regionales de la lengua
(en nuestro caso la variedad bonaerense) ya que el valor de todas las modalidades es
incalculable y, por lo tanto, esta mentalidad generalizada de que la nica variedad de
prestigio es la estndar, debe cambiar.
A menudo, he escuchado a alumnos de espaol comentarios como estudio espaol en
Espaa porque es el espaol correcto. Sin duda, estos aprendientes se estn perdiendo
la gran riqueza que aportan las lenguas, las cuales son mucho ms que una norma
estndar. Lo primero que deben aprender estos estudiantes es que una lengua est
formada por una serie de variedades regionales que la enriquecen y le dan vida, y que
todo hablante lo es de una variedad.
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