Una Conflictiva Encrucijada Política
Una Conflictiva Encrucijada Política
Una Conflictiva Encrucijada Política
18 de enero de 2015
No ha terminado el primer mes del ao 2015, cuando comienzan a hervir tras bastidores decenas
de rumores fatalistas, sobre lo que le depara a Venezuela este ao. Hay una clara situacin crtica
con orgenes profundos y preocupantes, y en un contexto econmico desfavorecedor. Las manos
de quienes anuncian los prximos planes de accin ante este imperio hegemnico chavista en cada,
alguna vez las not su antes amiga ciudadana, dndose apretones con las de los enemigos de la
Repblica.
Desde entonces, y con aumentada y sostenida sospecha, tal ciudadana afn a la oposicin
venezolana comenz, desde el ao pasado e incluso antes para algunos, a vagar en un estado
flotante, entre luchas en las tinieblas lacrimgenas y con resentimientos polticos irreversibles. Robo
de elecciones, reuniones de todos los alcaldes con el ejecutivo para planes impuestos siguiendo la
clsica lnea roja, dilogos enfriadores de calle, renuncias inesperadas ante poderes pblicos,
silencio, autocensura desencadenaron en lo que ahora, para una reciente matriz de opinin y
estrato poltico social llamado Resistencia, es una traicin a la patria.
Era necesario este juego poltico? Consideraron que el ao 2014 no era apto para un cambio
gubernamental? Muchos razonan, derivados de la lnea estratgica de Capriles, que el descontento
en 2014 tuvo su epicentro en las clases media y alta. Y los barrios? hizo alusin este dirigente al
sentirse ajeno a La Salida ya que no inclua a los sectores populares.
Las protestas, hoy y desde hace unos das, han comenzado. Las manifestaciones pseudo violentas
(llmese quema de cauchos y defensiva contra autoridades) en Tchira se han reanudado as como
algunas otras aisladas en Caracas, Maracaibo, y otros. Por otra parte, se ha visto manifestaciones
pacficas (a lo sumo gritar consignas concernientes a la escasez) tambin desde hace algunos das,
desde distintos puntos del pas.
No es mentira que el descontento de las primeras proviene inicialmente los estratos sociales medio
y alto. Sin embargo, el real afectado por los recientes problemas de abastecimiento, es el personaje
principal de las protestas del segundo tipo. No consigo leche, tengo ms de 11 horas en cola,
esto es culpa de Maduro. Comienza a pronunciarse este descontento que antes no se haba
manifestado, y a la vez acechan las comunicaciones del rgimen para echarle la culpa a quienes
conocen el origen del problema.
Claramente, los estratos sociales de estos dos tipos de protesta son muy distintos. El objetivo ltimo
de una clase media radical es la terminacin inmediata del rgimen a como d lugar, mientras que
por parte de la MUD este objetivo ltimo no est claro. Es que slo quieren liberar a los presos
polticos, y exigirle al gobierno que llene los anaqueles va productos regulados y subsidios? Dnde
quedan los cientos de problemas, en todos los mbitos, sin resolucin posible con este rgimen
hegemnico? La economa est hecha pedazos. La ley, corrompida desde sus cimientos en 1999.
La cultura? En degradacin, de igual manera que los valores y la sociedad. Todo tiene manchas.
Es tan necesario ser hipcrita? Qu planean los integrantes de la MUD con tal estrategia? Parece
ser, que ganar adeptos de las menores clases sociales. Acaso su objetivo es ganar popularidad para
las prximas parlamentarias? La indignacin de los estudiantes es inevitable para ellos. Esta cnica
lnea discursiva ignora completamente todo el peregrinaje que ha llevado el cuerpo activista en
contra de este rgimen: los muertos del ao pasado, las diarias protestas durante los meses febrero
y abril, y el olvido a este sector importantsimo, protagonista del futuro y del progreso venezolano,
que se ve cada vez ms remoto.
Por otro lado, desde un punto de vista estratgico, la pasional protesta de la Resistencia parece
causar ms prdidas que ganancias por s sola, y probablemente la verdadera salida no sea trancar
una calle y esperar por las autoridades, sino re-direccionar ese valor e ir a una cola a convencer a la
gente para catalizar el descontento. Una propuesta cuyo objetivo es claro, pero tambin est
implcita la intencin de tomar las riendas de la ola que pretende liderar injustamente la mesa de la
unidad, y balancear el poder poltico a quienes han dejado el pellejo y cuyas manifestaciones no han
consistido en una foto, sino en horas de dedicacin, y no a quienes presuntamente pretenden
apropiarse de esta ganancia slo para una supuesta y utpica victoria electoral prxima.
Conducir este poder por parte del sector disidente es crucial, y es la razn de ser de este ensayo. El
objetivo ltimo debe y siempre seguir siendo la destruccin total de este rgimen, pero debemos
subir un escaln por paso. Es cierto, no nos dejemos engaar. Los dirigentes MUD no son
esperanzadores dado su patrn populista, pero tambin es pertinente decir: no nos ilusionemos.
Desafortunadamente, el poder reside en las mayoras, y es irreal creer que la mitad del pas
entender de la noche a la maana que el rumbo poltico de Venezuela ha estado mal desde hace
16 aos. Dios salve a Venezuela. Fe y esperanza es lo que le queda al venezolano; en los meses
siguientes puede que el hambre toque las puertas de la casa del descontrol social, y es ah donde la
verdadera distopa comienza. Esperemos que tocar fondo, sea antes que tal catstrofe.