Reflejos de La Cosmovisión Originaria. Arte Indígena y Chamanismo en El Noroeste Argentino Prehispánico
Reflejos de La Cosmovisión Originaria. Arte Indígena y Chamanismo en El Noroeste Argentino Prehispánico
Reflejos de La Cosmovisión Originaria. Arte Indígena y Chamanismo en El Noroeste Argentino Prehispánico
E NTRELAZANDO
LO TIL Y LO BELLO
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como en las culturas andinas de Amrica, un ideal de belleza (Cereceda, 1986, 1988) en esencia coincidente con el ideal
social y existencial de controlar el caos y reinstaurar permanentemente las cualidades de lo sagrado en el aqu y el ahora.
Bellas son as las cosas que mejor reproducen la estructura y
el orden csmico, las que nos permiten vislumbrarlo a cada
instante en la pequea escala del objeto, en la disposicin
espacial de una ceremonia, o en las proporciones y orientaciones de una construccin. Bellas son tambin pues nos
indican el camino para acceder a los planos sobrenaturales,
algo que convierte su belleza no slo en una expresin sino
en un vehculo de lo sagrado.
A veces, como sucede con gran parte del arte prehispnico de nuestra regin Noroeste, la reiteracin de temas y
recursos compositivos por ejemplo, la figura felnica y sus
mltiples transformaciones resulta casi obsesiva. Sin
embargo, si bien es claro que el arte indgena est fuertemente pautado, siempre se advierte que ha habido espacio
para la creatividad y la bsqueda de la distincin. Un agregado de dedicacin, un mayor esfuerzo entregado a la confeccin, el terminado o la decoracin de ciertas piezas, nos
muestran tambin la intencin originaria de diferenciarlas
del comn, de convertirlas en algo especial, para alguien
especial o reservadas para ocasiones especiales; tal vez se
advierte hasta un cierto perfeccionismo en la manera de
expresar, con ms acierto o precisin, el mensaje buscado.
As, las piezas precolombinas de arte se distinguen por
ese cruce tan peculiar de esttica y simbolismo. El esfuerzo
por el embellecimiento se tradujo al mismo tiempo en una
mayor carga significativa. Cuanto mejor se hace, ms se dice.
Su propsito esttico no acababa en s mismo, sino que era
adems el vehculo de otros propsitos: resguardar un conocimiento codificado, ostentar una identidad tnica, oficiar
como una ofrenda ritual, ser un emblema de poder, acompaar el alma de un muerto o incluso, como las ceremonias
mismas, intervenir activamente en el mantenimiento del
equilibrio de las energas csmicas.
U NA
T RADICIN ,
CREATIVIDAD Y SIGNIFICADO
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ACTIVA PRESENCIA
A travs de las formas, las imgenes, el juego de los colores y las texturas, las proporciones, los tamaos y las disposiciones, el arte indgena genera una diferencia, interrumpe
la regularidad de lo cotidiano y se convierte en un efectivo
instrumento simblico, una herramienta comunicativa, un
hecho de sentido, una fuente de significado.
A PERTURA
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CHAMANISMO:
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Del estudio del chamanismo como fenmeno transcultural es posible extraer cuatro grandes temas que lo caracterizan: el viaje, el trance, la transformacin y el poder. Con infinidad de variantes, aparecen sin embargo con recurrencia y
encuentran tambin su expresin en el arte. Estos cuatro
temas pueden considerarse los ejes que organizan tanto la
concepcin del mundo como la prctica chamnica
(Llamazares, 2004).
El viaje entre los mundos, o entre diferentes dimensiones
espacio-temporales alternativas, es la actividad fundamental
del chamn. La forma de hacerlo es generalmente a travs
del vuelo, cuando se trata de ascensos, aunque tambin pueden ser descensos en distintas formas de cada. Generalmente
est acompaado por espritus o animales que le sirven de
guas, en especial aves, pues de ellas el chamn aprende no
solamente la tcnica del vuelo sino la capacidad escrutadora
y la visin penetrante que le otorga a su vez la facultad de
tener visiones o captar visualmente informacin sobre otros
mundos. La idea del viaje est inscripta en la base de la cosmologa chamnica, una concepcin multidimensional y
estratificada del universo en la que predomina la triparticin
en Cielo (Supramundo), Tierra (Mundo Intermedio) y
Mundo Subterrneo (Inframundo). Los tres grandes planos
del mundo se comunican entre s por el eje vertical o axis
mundi eje del mundo que es el lugar por donde se producen los pasajes.
El trance exttico es la forma clsica, casi podramos
decir, el vehculo del viaje chamnico. Para acceder a estados de trance se utilizan diversas tcnicas e instrumentos. El
ms antiguo y generalizado es la vibracin de la msica y la
percusin, el canto, la recitacin reiterada o el movimiento
fsico constante. Uno de los medios ms potentes es la asimilacin de plantas psicoactivas que modifican directamente la qumica cerebral y corporal, llevando a estados de conciencia y sensibilidad amplificada. El trance tambin se
acompaa con el uso de diversos objetos y elementos de
poder, generalmente bastones, cetros, cuchillos o piezas
cortantes, piedras semipreciosas, plumas, pezuas o partes
de animales, as como ciertas sustancias minerales, vegetales o animales. Por ltimo, el arte mismo puede considerarse como un instrumento exttico, a travs del uso de iconos
como estatuillas, tallas, vasijas o piezas decoradas o la
realizacin de imgenes sobre superficies naturales como
corteza, roca, tierra alisada o el propio cuerpo. Por ltimo,
consideremos que todos estos medios se basan en el dominio de tcnicas psquicas para lograr concentrarse y ampliar
la percepcin.
Lograr la transformacin es uno de los objetivos principales del chamn, que sobreviene como resultado del viaje. Su
tarea siempre es transformar algo: una enfermedad, una
sequa, un ataque, un estado de incertidumbre y confusin.
De modo que el arte chamnico por excelencia es la transmutacin de los estados. Su gran desafo reside en que ningn humano ser capaz de transformar algo externo a l si
previamente no ha podido sobreponerse a la experiencia de
su propia transmutacin, la que suele implicar el enfrentamiento del dolor fsico, de los peores miedos y hasta de su
propia muerte y resurreccin. Como resultado de este proceso el chamn tiene sus distintas iniciaciones, adquiere sus
animales y objetos protectores, as como ciertas facultades
que lo distinguen, como la visin penetrante, la posibilidad
de comunicarse con los espritus tanto de seres vivos como
de muertos y de controlar ciertas fuerzas de la naturaleza.
Tambin, a travs de la experiencia de la transformacin personal, logra aprender el don de curar, que en definitiva es
saber cmo transmutar la enfermedad y regenerar la vida.
Un captulo especial de este aprendizaje de la metamorfosis
es el que le permite su conversin en otros seres, generalmente animales (Plotkin, 1997).
El poder del chamn proviene de planos sobrenaturales o
divinos y significa un dominio de las fuerzas ocultas, tanto
positivas como negativas. Aunque a menudo es una cualidad
hereditaria, su advenimiento suele ser anunciado por algn
acontecimiento especial, una llamada que declara la vocacin o el destino que el chamn debe emprender. Luego, a
travs de largos y penosos aprendizajes e iniciaciones, va
adquiriendo su conocimiento y perfeccionando sus facultades, pero stas en definitiva siempre nacen de sus contactos
con lo sobrenatural. Esto es lo que le confiere un status social
muy especial y, en ciertas circunstancias, ello se convierte en
una forma de legitimar su poder terrenal como lder poltico-religioso de las comunidades.
Su vigencia y sus proyecciones contemporneas han llevado actualmente a un replanteo del chamanismo que va ms
all de lo estrictamente antropolgico. Dndole una dimensin ms amplia, algunos investigadores sugieren el trmino
chamanidad en lugar del tradicional chamanismo para
definir lo que, antes que una actividad, puede tambin concebirse como un estado del espritu o una forma particular de
conciencia (Vitebsky, 1995, en Costa, 2003: 10).
Otros autores parten de este fenmeno para caracterizar
lo que podra considerarse como un nuevo paradigma energtico-cosmolgico que se funda en el manejo de las potencialidades
de la conciencia humana y en una concepcin del universo
L AS
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Fig. 1. Recreacin esquemtica de la cosmologa andina. Los tres planos o mundos, sus dioses y animales. Primeras biparticiones y estructura cuatripartita.
LA
COSMOVISIN ANDINA
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estn presentes en las cosmovisiones originarias y por supuesto en el mundo andino. Para el indgena, los animales son
seres tan importantes como los humanos, a los que es necesario respetar, cuidar y tratar como iguales. En un tiempo remoto ellos hablaban y muchos de los animales actuales o son
ancestros antiqusimos o son las almas de los muertos recientes. Pero los animales son algo ms que la representacin de
un espritu. Son un ejemplo. El registro de sus comportamientos al cazar, comer, jugar o dormir constituye una sabidura
natural que los aborgenes incorporan a su propia vida.
El animal encierra adems una doble significacin: por
una parte es lo no humano, lo totalmente otro, incluso en
ciertos casos lo terrible o bien lo sublime; y por la otra, lo
completamente cercano y conocido: En la estrecha relacin
entre animal y hombre, el animal puede ser hombre y el hombre animal (Van der Leeuw, 1964: 67).
Muchas veces, como ya vimos, los chamanes van al cielo
en compaa de sus animales guas y en ese plano celeste las
constelaciones representan animales o tienen que ver con su
mundo. Una vez ms las estrellas y el cielo nos remiten a la
idea de que los sucesos de la tierra son reflejo de lo que acontece en el cielo.
Los rituales mortuorios se corresponden con un ordenamiento csmico, una suerte de cosmificacin donde la
orientacin ritual tiene una importancia cosmognica
(Reichel-Dolmatoff, 1980).
Pierre Duviols (1976) denomina litomorfosis del ancestro al proceso por el cual las personas de prestigio al morir
sufren el desdoblamiento de su alma, por lo que es menester
realizar algunos rituales para garantizar la unin de los diferentes mundos. As, el cuerpo es momificado (mallqui), y el
pueblo lo venerar y le rendir ofrendas ya que su misin
ser ayudar a germinar la tierra y hacer de intermediario
entre el mundo de los hombres y la tierra de abajo (Uku
Pacha). Asimismo se erigir un objeto sagrado, un dolo de
piedra o huanca, con forma de monolito o menhir,5 que se
plantar verticalmente en los campos de cultivo, para que de
esta manera la imagen del antepasado perdure, fecundando
la tierra, favoreciendo la agricultura e intermediando esta vez
entre el mundo de los hombres y el mundo de arriba
(Hanan Pacha). Las dos almas del muerto regresarn peridicamente, una a la huanca y la otra al mallqui, por eso es tan
importante conservar la momia intacta, para que su alma
pueda volver a habitarla en algn momento.
Es lo que suceda en festividades ancestrales que luego
de la conquista espaola se asociaron al da de los muertos
cuando los mallquis eran llevados en andas desde el cemen-
terio (ayawuaka) hasta la casa. El trmino ayaq marqan significa precisamente llevar en andas. Entonces el alma y el
espritu regresaban, compartiendo con los vivos la comida y
los relatos acerca de su historia; recin entonces el cuerpo era
devuelto al cementerio6 (Carmelo Sardinas Ullpu, Tayta
Ullpu, com. pers., 2005).
Estas prcticas eran comunes a todo el mundo andino.
Las crnicas dan cuenta de que durante los primeros enfrentamientos con los muiscas de los valles bogotanos, los jefes y
sus guerreros en plena batalla portaban en alto a sus ancestros momificados, los que, vestidos con sus mejores atavos
ceremoniales, los protegan y fortalecan al mismo tiempo
que neutralizaban el poder de los enemigos.
En relacin con las costumbres funerarias andinas resulta interesante destacar la vinculacin entre la posicin sentada o flexionada y las situaciones de pasaje. sta parece ser la
forma en que se representan las personas en estado de trance como las que aparecen en la escena de danza de la cueva
de La Candelaria. Segn recientes interpretaciones (Prez
Golln, 2000b), tambin los famosos suplicantes esculturas
lticas de gran abstraccin que representan figuras humanas
sentadas con los brazos en alto podran haber sido dobles
lticos mviles de los ancestros.
El sentido comunitario de la vida
Arribamos as a otro gran tema de la cosmovisin originaria que hemos llamado el sentido comunitario de la vida
(Martnez Sarasola, 1998), expresin en lo social de la sacralidad y base sobre la cual esa cosmovisin se desarrolla y
revitaliza en forma constante. As como darle sentido al
mundo es equilibrar las energas csmicas con las de la tierra, el hombre adquiere su plenitud en tanto pueda articularse con la comunidad.
Los principios de intercambio y reciprocidad en el mundo
andino son sustanciales al espritu comunitario, como lo era la
economa de amparo del Tawantinsuyu por la cual los cultivos y rebaos familiares y comunitarios, ms all de los tributos que se exigan, estaban al servicio de todos, evitando as que
nadie quedara desprotegido (Rostowrowski, 1976; Kusch,
1975). Era el espritu del ayllu (comunidad) andino que responda a un orden social y csmico a travs de una forma de
vida, una cultura que tena por eje a lo colectivo, al todos.
Es el sentido del yanapay como desprendimiento de yanantin (Platt, 1986), cuyo significado es cooperacin recproca,
accin de ayudar o trabajar con otro y a sus rdenes (Lira,
1982); o el de la minga o minka, por el cual un grupo familiar
invita a sus vecinos y amigos a que lo ayuden en algn trabajo en particular (generalmente relacionado con los cultivos,
los animales o la reparacin de una parte de la vivienda),
favores que son reconocidos con comida, celebracin y la
obligacin de ayudar cuando sus vecinos a su vez lo soliciten.
Una infinidad de objetos con sus decoraciones son la
manifestacin de esta intensa vida en comunidad: pucos,
vasos, morteros, utensilios varios, representaciones de pinturas y tatuajes corporales, peinados, adornos, todos embellecidos por las manos de aquellos que no dejaron de poner en
estas piezas su impronta y su preocupacin por reflejar en
ellas los principios sutiles y sagrados de la concepcin del
mundo de sus pueblos.
EL
ARTE PRECOLOMBINO
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sobrenatural e informarnos al respecto. Los smbolos cumplen el doble rol de representar y al mismo tiempo ser aquello
mismo que representan (F. Gonzlez, 1998). En tanto cada
pieza sintetiza en pequea escala los principios bsicos de la
cosmovisin, es mucho ms que un simple testimonio y se
convierte en un recurso simblico, un verdadero instrumento para intervenir activamente en la realidad, y de esta manera participa del proceso de generacin social de sentido y
significado que est en constante recreacin.
Por cierto, al abrir la dimensin simblica del arte precolombino, podemos ver que las sociedades indgenas lo utilizaron para diversos fines. Adems de la clsica funcin
representativa describir personajes, objetos, animales, divinidades e incluso situaciones, podemos reconocer otros
propsitos activos o evocativos, como la ostentacin de identidad cultural, la invocacin de espritus y fuerzas sobrenaturales, la legitimacin del poder terrenal, la participacin en
rituales y ceremonias, la cartografa de otros estados de conciencia y la bsqueda de visiones, entre otras.
Imgenes de la totalidad: triparticin del cosmos
y animales sagrados
Nos interesa destacar una funcin particular, directamente ligada al sentido de sacralidad, a la bsqueda por el aquietamiento del caos y el sostenimiento del equilibrio que, como
vimos, son propsitos fundamentales de la existencia indgena. Ciertas imgenes tienen la cualidad de reproducir, a travs de diversos recursos simblicos, la estructura del cosmos
y los principios bsicos que sostienen su funcionamiento. De
esta manera, pueden haber oficiado como verdaderos iconos
cosmolgicos, y su sola presencia en determinados contextos
ceremoniales o en manos de personajes destacados habra
sido una forma de reinstauracin del orden csmico a travs
de su recreacin en el plano humano.
Estas imgenes tienen un poder especial: el poder de lo
sagrado. Y se es justamente el poder que se transmite y que
respalda a los hombres y las mujeres con autoridad.
Analizaremos, como ejemplo ms cercano, el caso de las placas metlicas del Noroeste, especialmente las que se atribuyen
por su elaborada decoracin a la cultura Aguada del perodo
Medio o de Integracin, de las cuales varios ejemplares pueden apreciarse en esta exhibicin (ver pp. 124-125).
Las placas complejas constituyen algo nico en el arte precolombino. Todo en ellas nos habla de que se trataban de objetos de alto valor. No slo por el grado de perfeccionamiento
tcnico que requiri su fabricacin ya que son uno de los
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pocos casos en que se emple una delicada tcnica de modelado y vaciado como es la fundicin a la cera perdida (A.R.
Gonzlez, 1992; L Gonzlez, 2004) sino por la riqueza de su
iconografa, que es lo que las distingue fundamentalmente.
Pareciera que en ellas se quiso volcar concentradamente
lo ms medular del simbolismo andino, algo as como el corazn de un mismo lenguaje iconogrfico que encontramos reiteradamente en tantas otras piezas y soportes de distintas
pocas, estilos y procedencias (Gonzlez et al., s/f). Un lenguaje simblico comn tambin al arte precolombino de
Amrica que gira en torno de cuatro temas principales: el
jaguar, las aves, las serpientes y la figura humana como elemento central que conecta y organiza los tres temas animales.
El estudio arqueolgico de estas placas metlicas fue realizado por Alberto Rex Gonzlez en una obra vastsima (1992)
que incluye el conjunto de piezas correspondientes tambin a
otros perodos, de modo que no entraremos aqu en el tema
ms que para resaltar algunos aspectos interpretativos.
En el arte precolombino, adems de la figuracin y la
abstraccin, se han utilizado diversos recursos representativos. Uno de ellos, especialmente basado en el pensamiento
analgico propio del simbolismo, es la connotacin. Algo
sugiere indirectamente lo que se quiere significar. Se aplica
sobre todo en las representaciones zoomorfas. Puede ser la
imagen completa de un animal que acta como metfora de
otra cosa, o slo una parte como el clsico ejemplo de las
manchas del jaguar, que acta como metonimia de la imagen
completa. La condensacin metonmica, que consiste en
tomar la parte por el todo, es tambin un rasgo holstico del
pensamiento analgico, pues implica la capacidad de ver el
todo contenido en los atributos de cada una de las partes.
Ambos procedimientos se aplican en el caso de la iconografa de las placas grabadas para lograr no slo la reproduccin de la divinidad solar, interpretada como el Punchao
incaico (Prez Golln, 1986; Gonzlez, 1992) sino, de manera ms abstracta, la representacin simblica de la cosmologa estratificada tripartita, del rol humano de intermediacin,
de la dualidad y la dinmica de complementacin de los
opuestos, a travs del significado metafrico de los animales y la articulacin de varios ejes de simetra que generan
diversas particiones y desdoblamientos (Bovisio, 1995;
Llamazares, 2003c).
Con independencia de la forma de su contorno que
puede ser circular o cuadrangular, el esquema compositivo
bsico se repite, con ligeras variantes, a lo largo de la mayor
parte de las casi treinta placas conocidas con este tipo de
decoracin. Consiste en una figura humana de frente que
ocupa el eje vertical central de la pieza. Su vestido es complejo: la tnica o unku suele estar cubierta por figuras geomtricas dispuestas en diagonal, pectorales, collares y prominentes
diademas o adornos ceflicos. A sus lados, apoyados simtricamente sobre sus hombros, se disponen dos felinos, y a sus
pies dos lagartos o serpientes terminan de rodear la figura al
confluir sus cabezas hacia el centro. En algunos casos, en
lugar de felinos son aves las que flanquean al personaje. En
otros, ste ha fundido en su cuerpo los atributos de esos animales al presentar las inconfundibles manchas del jaguar o las
escamas de los saurios. Algunos llevan en sus manos los elementos del sacrificio: hachas, mazas y cabezas colgando.
Los tres animales que encontramos representados en las
placas son considerados sagrados dentro de la cosmovisin
andina y estn identificados con los espritus de las diferentes partes del mundo.
El ave, particularmente el cndor o kuntur en los Andes
del sur, es el mensajero del Hanan Pacha, el mundo de arriba.
Casi universalmente, las aves son smbolos celestes y solares
por su cualidad de elevarse hacia las alturas, ms all de las
nubes, donde siempre brilla el sol, y por su capacidad para
mirar las cosas desde lo alto, con la perspectiva divina. Segn
la mitologa el cndor puede considerarse la representacin
de Viracocha, el principio creador del orden en el tiempo
primordial de oscuridad, tambin manifestado en los dioses
Tunupa o Tarapac (Lafone Quevedo, 1950).
Por contraposicin, las serpientes junto con los dems
seres anfibios que reptan, caminan o se arrastran por la tierra, son representantes del Uku Pacha, o mundo de abajo.
Tienen un amplio simbolismo en la mitologa andina asociado con la lluvia, el rayo y otros fenmenos celestes ligados a
la fertilidad. Por su proximidad con los ambientes umbros y
los cursos de agua se relacionan clsicamente con el inframundo, aunque por su dualidad tambin participan de los
planos terrestres, conectando ambos niveles cosmolgicos.
En la mitologa, las serpientes duales con la forma de la anfisbema serpiente de dos cabezas o yendo en pareja son las
que pueden recorrer los tres mundos. Transformndose en
rayos o arco iris al pasar al mundo superior, reinician as el
ciclo de fecundacin de la tierra a travs de la lluvia
(Valcrcel, 1967). Un fantstico ejemplo de cmo los contrarios se unen a travs del desdoblamiento.
Por su parte, el felino aparece como representante del Kay
Pacha, el mundo del medio, por su bsica cualidad de potencia
ctnica ligada a las fuerzas vitales de la tierra. Su simbolismo,
en rigor, es uno de los ms amplios y complejos pues tambin,
al igual que las serpientes, puede conectar los tres planos cosmolgicos, y en el mundo incaico est particularmente identificado con la deidad solar Punchao (Prez Golln, 1986;
Gonzlez, 1992, 1998). Su carcter nocturno, que lo hace ver y
moverse de noche con facilidad, lo asocia con la oscuridad, la
muerte y el inframundo, y lo convierte en el smbolo por excelencia del viaje al ms all (Schwarz, 1988). Tal vez ste sea
el sentido que ms lo vincula al chamanismo.
En Sudamrica, el jaguar es el principal animal iniciatorio, el gua, el alter ego, el psicopompo y demiurgo, el vehculo y destino de la transformacin, el sinnimo mismo del
chamn.7 Al mismo tiempo, posee una suprema cualidad
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zontal que gener dos grandes semiesferas y una zona intermedia. Esta forma inicial de biparticin entre Cielo y Tierra
es a su vez la manifestacin primordial de la dualidad y se
expresa no slo en el arte sino tambin en la organizacin
social, en la concepcin del paisaje, en la distribucin de los
cultivos y tantas otras formas en que el arriba y el abajo, lo
alto y lo bajo, juegan como opuestos complementarios.
Imgenes de la intermediacin: verticalidad de lo
humano y la diagonal sagrada
Segn la cosmogona y la teogona andinas, sucesivas
particiones y subdivisiones fueron generando los distintos
planos y lugares del cosmos, y ubicando en cada uno de ellos
sus principales atributos, los astros, los dioses, los elementos
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ridades, en el arte de vincular y acompaar la complementariedad de los opuestos. De esta manera, la concepcin andina sobre la dualidad se relaciona profundamente con la
visin energtica e interconectada de la vida y el cosmos.
Tambin la cualidad dual es lo que permite una cosmogona caracterizada, como hemos visto, por la idea de que todo
se forma a partir de desdoblamientos y particiones sucesivas.
Cada creacin es un nuevo despliegue de la dualidad originaria. As, se va generando la multiplicidad de las formas y
los seres existentes que, sin embargo, conservan los atributos
estructurales bsicos de la oposicin dual.
El mundo entero, tanto el natural como el social, se concibe y organiza siguiendo las pautas de la divisin en mitades,
cuartos y sus sucesivas subdivisiones. Y, as, el despliegue de
la dualidad adquiere mltiples manifestaciones, desde las concepciones filosficas, la mitologa y la religiosidad
(Krickeberg, 1971; Duviols, 1977a, 1977b; Bouysse-Casagne,
1988; Harris y Bouysse-Casagne, 1988; Urbano, 1981, 1993), la
aplicacin del conocimiento astronmico (Sullivan 1999), las
formas de organizacin social y poltica (Arnold, 1983), la
vida ceremonial, la cotidianidad, el uso del paisaje, la arquitectura (Hyslop, 1987; Milla Villena, 2003; Morris, 1987) y, por
supuesto, encuentra una expresin particularmente notable
en el arte y la iconografa, a travs de diversos recursos representativos, simblicos, cromticos y compositivos (Arnold,
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apareada, su enfrentamiento, o por el cambio en la disposicin u orientacin de las imgenes sobre la pieza.
La duplicacin apareada podemos verla en las piezas que
reiteran respectivamente la figura humana, ataviada con la
tpica tnica o unku, sobre la superficie circular de una placa
tarda (ver p. 117) donde se repite incluso la distribucin cromtica de la pintura. Una variante son las piezas de cuerpo
doble, que tambin suelen repetir la decoracin (ver p. 128).
El segundo caso, las figuras enfrentadas, es muy comn y
podemos verlo en diversos tipos de piezas, como los hornillos de las pipas a los que se han incorporado dos rostros
zoomorfos (ver p. 220). Un efecto similar se logra tambin a
travs de la disposicin polar de la decoracin. Sobre todo en
vasijas de contorno regular, la repeticin completa de un
campo de motivos geomtricos en distintas caras genera por
enfrentamiento una diferenciacin en lados opuestos. Es el
caso de las urnas Santa Mara (ver p. 132) y de gran parte de
las piezas globulares de los estilos Aguada (ver p. 110).
El tercer caso mencionado, que incluye el cambio en la
orientacin de las figuras, constituye una variante del segundo
y lo podemos apreciar por ejemplo en el mortero de piedra
rodeado por dos felinos que miran en distintas direcciones
(ver p. 130) o en la vasija con dos cabezas felnicas (ver p. 131).
Una variacin muy interesante es la de las figuras, generalmente animales, que presentan dos cabezas rebatidas en sentidos opuestos pero que estn unidas por un solo cuerpo. La
ms comn es la llama doble, como la que adorna el regazo de
esta figura humana (ver pp. 158-159) semejante a las representadas tambin en el arte rupestre (ver fig. 7 a y b y p. 45).
Un tipo particular de figuras duales es el de las imgenes
anatrpicas, cuyo opuesto complementario o una imagen
idntica aparece al girar la posicin de la pieza. En un trabajo pionero sobre el tema Alberto Rex Gonzlez las define as:
Se trata de imgenes en las que a pesar de la representacin aparente de un solo sujeto o de una figura nica sta posee, en realidad, un
contenido doble [...] se trata de dos imgenes en una, segn jueguen
sus elementos constitutivos de acuerdo con la direccin en que se mire.
La segunda imagen slo se hace visible segn el ngulo de observacin de la pieza (Gonzlez, 1974: 51). Incluimos un ejemplo
ilustrado por este autor en otra obra reciente (Gonzlez,
1998) (ver fig. 8).
Por ltimo, encontramos otra clase especial de imgenes
duales que son aquellas en las que se combinan atributos
humanos y animales, o de distintas especies animales entre s,
conformando hbridos que no solamente pueden interpretarse como representaciones de la dualidad sino como imgenes
ligadas al fenmeno chamnico de la transformacin, sobre
las que trataremos en el punto siguiente referido a este tema.
El juego de los opuestos tambin encuentra su manifestacin en el tratamiento cromtico a travs de la oposicin
entre lo claro y lo oscuro, o en el enfrentamiento de los
pares de colores complementarios o de combinaciones contrastantes. Una de las ms usadas, especialmente en la decoracin geomtrica de estilos cermicos tardos, es el par
rojo y negro que se utiliza en alternancia dentro de complejas figuras lineales o en el enfrentamiento segn los ejes de
simetra (ver pp. 102 abajo, 103).
Otra forma de lograr un efecto de oposicin lo encontramos en un recurso formal de cierta complejidad como es
el juego perceptivo entre figura y fondo. En estos casos, la
decoracin que se aplica sobre la pieza sea por medio de
la pintura o el grabado no da lugar a las imgenes sino que
constituye el fondo. Por oposicin, la figura queda conformada con el color o la superficie de base de la pieza. Una
resolucin figurativa de este tratamiento lo encontramos en
ciertos estilos cermicos Aguada, como el Ambato negro
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Tal vez el profundo simbolismo que une la luz, la dualidad y lo sagrado sea un camino que nos permita comprender a su vez la estrecha vinculacin entre lo divino, el brillo
y el poder (Llamazares, 2006a).
Imgenes de la comunin: hbridos y metamorfosis
En el arte precolombino encontramos una forma muy
caracterstica de representar ese estado de conciencia que
hemos llamado de comunin o consustanciacin entre lo
natural y lo humano. Se trata de imgenes hbridas que renen atributos humanos, animales e, incluso, vegetales, en
mltiples y diversas formas y combinaciones.
En nuestro estudio sobre arte y chamanismo
(Llamazares, 2004) hemos sugerido que este tipo de imgenes podra corresponder a la representacin simblica del
proceso de transformacin chamnica en sus diversas fases.
En algunos casos se reconoce claramente la fisonoma antropomorfa con algunos elementos zoomorfos como los conocidos personajes Aguada con mscara felnica, lo cual puede
corresponder al comienzo de la metamorfosis o a la descripcin ms realista del chamn actuando con la indumentaria
ritual que suele incluir el uso de mscaras, pieles o plumas de
animales de poder, tocados y otros aditamentos. En otros
casos, la representacin es totalmente fantstica; ya ha perdido sus rasgos humanos para convertirse en un ser completamente diferente, tal vez el resultado final del mismo proceso.
El arte del Noroeste argentino es rico en los dos tipos de
representaciones.
Sin duda, la temtica principal es la que manifiesta la simbiosis entre las figuras del chamn y el jaguar (Llamazares,
2006b), aunque tambin se integran otros temas en la metamorfosis como las serpientes y los camlidos y, en menor
medida, las aves y los murcilagos. Este fenmeno, propio del
trance chamnico, tiene algunas expresiones muy especficas
en el arte de la cultura Aguada. La ms frecuente es la representacin del personaje ataviado con atributos felnicos mscaras, fauces, garras, manchas en su cuerpo y dems objetos
de poder (ver fig. 9 a y b, pp. 22, 26, 27). Otras veces, la figura adquiere un carcter francamente hbrido (ver p. 226) o
donde el reconocimiento de una forma fundamental humana o animal se hace difcil (ver fig. 10, p. 30).
En muchos casos, las imgenes se hacen aun ms complejas debido a un recurso representativo muy curioso que
es la prolongacin de las extremidades con apndices zoomorfos estilizados. Generalmente es la lengua o la cola del
felino que se bifurca en nuevas cabezas o fauces, felnicas u
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ofdicas. Si bien los elementos que participan son claramente zoomorfos, el mecanismo de generacin de las formas
corresponde ms a un crecimiento propio de lo vegetal.
Este fenmeno podra corresponder a lo que John Rowe
(1962, 1973) interpret como kennings para el arte Chavn,
tomando esta denominacin de la poesa nrdica medieval.
Los kennings son figuras retricas literarias que establecen
comparaciones por sustitucin de imgenes; de esta manera, Rowe hace una analoga con el procedimiento tpico del
arte precolombino que utiliza la boca, los colmillos o las
fauces del felino como sustitucin de la figura completa del
animal. Segn este autor, una forma particular de kennings
es aquella en la que cualquier saliencia o apndice del cuerpo humano o animal se asume como una lengua que se proyecta y culmina en una nueva mandbula o boca de la cual
a su vez nace una nueva lengua. Esto puede suceder en
cualquier extremidad, no slo en la lengua y la boca sino
tambin en la cola, los brazos, las patas y, a veces, en los
cabellos humanos que caen en forma de serpientes, o en los
apndices ceflicos que rematan en cabecitas de felino (ver
fig. 10, 11, p. 230).
En el arte Aguada el felino se representa en forma convencional, de perfil, con un solo ojo visible en su cabeza por
lo general girada hacia atrs y la cola enroscada sobre el
lomo; el cuerpo alargado y rechoncho, moteado por las
manchas clsicas del jaguar o yaguaret. En asociacin con
la figura humana aparece como animal tutelar, flanqueando
al personaje a sus dos costados, generalmente sobre los
hombros. Como doble o alter ego, aparece ubicado en la
espalda o sobre la cabeza de la figura antropomorfa (ver
fig. 12 y p. 29).
La identificacin entre lo humano y lo felnico est expresada tambin a travs de recursos ms abstractos. Uno de
ellos es la utilizacin de la perspectiva lateral propia de la
felinidad, segn la forma de representacin convencional
del arte Aguada (Kusch, 1991). Esto se puede ver en ciertas
imgenes antropomorfas, donde el cuerpo aparece representado de frente como corresponde a lo humano y su rostro
ya felinizado, de perfil, con un solo ojo y girado hacia alguno
de los lados (ver fig. 13 y p. 25, p. 129 arriba).
Por ltimo, tal vez las imgenes que con mayor grado de
sntesis y abstraccin representan la simbiosis hombre-animal son las metonimias. En la iconografa Aguada abunda
este recurso en relacin con el tema felnico y ofdico. Las
manchas del jaguar, las fauces, el ojo lateral o las garras aparecen muchas veces solas, formando figuras abstractas o,
como vimos, combinadas con el tema antropomorfo. Lo
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su brillo y su sonido, ms que con la riqueza material, tuvieron una estrecha vinculacin con lo divino. En el caso particular del oro, adems de sus valores como metal incorruptible, estaba asociado directamente con el Sol, el sagrado Tata
Inti generador de luz, calor y vida. El oro fue probablemente su sangre aqu en la tierra y, tambin, un vehculo de fertilidad. Al ataviarse de oro, ciertos personajes de gran jerar-
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E SPEJOS
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DEL COSMOS
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son de esta forma una de las claves para acceder al significado simblico del arte.
Hasta aqu llegan nuestras reflexiones. Esperamos que
ellas sean una contribucin para el estudio de las sociedades
indgenas del Noroeste. Han sido realizadas desde la particular mirada del arte y la cosmovisin, lo que nos ha llevado a
sumergirnos con el mximo respeto que nos fue posible en
un mundo peculiar, en el que debimos transitar amplsimos y
enriquecedores campos como el chamanismo, las plantas
sagradas, la concepcin del mundo andino y el lenguaje simblico de los objetos que han llegado hasta nosotros.
El resultado de la travesa creemos que es muy sugerente
y no exento de contundencia, en tanto expresin de notables
culturas que hicieron y hacen de la visin totalizadora de
la vida una regla esencial.
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