Este documento presenta el programa del III Congreso Internacional de Investigación y Práctica Profesional en Psicología, XVIII Jornadas de Investigación y el VII Encuentro de Investigadores en Psicología del MERCOSUR, que se llevará a cabo del 22 al 25 de noviembre de 2011. Incluye la lista de autoridades de la Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires, la comisión organizadora del congreso y el comité científico. Además presenta una serie de resúmenes de trabajos que
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Este documento presenta el programa del III Congreso Internacional de Investigación y Práctica Profesional en Psicología, XVIII Jornadas de Investigación y el VII Encuentro de Investigadores en Psicología del MERCOSUR, que se llevará a cabo del 22 al 25 de noviembre de 2011. Incluye la lista de autoridades de la Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires, la comisión organizadora del congreso y el comité científico. Además presenta una serie de resúmenes de trabajos que
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Este documento presenta el programa del III Congreso Internacional de Investigación y Práctica Profesional en Psicología, XVIII Jornadas de Investigación y el VII Encuentro de Investigadores en Psicología del MERCOSUR, que se llevará a cabo del 22 al 25 de noviembre de 2011. Incluye la lista de autoridades de la Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires, la comisión organizadora del congreso y el comité científico. Además presenta una serie de resúmenes de trabajos que
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MEMORIAS
III Congreso Internacional de
Investigacin y Prctica Profesional en Psicologa XVIII Jornadas de Investigacin Sptimo Encuentro de Investigadores en Psicologa del MERCOSUR 22 al 25 de noviembre de 2011 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA ISSN 1667-6750 FACULTAD DE PSICOLOGA Secretara de Investigaciones 2 Autoridades de la Facultad de Psicologa Decana Prof. Lic. Nlida C. Cervone Vicedecana Prof. Dra. Luca A. Rossi Secretaria Acadmica Prof. Lic. Graciela C. Paolicchi Secretario de Investigaciones Prof. Mg. Martn J. Etchevers Secretaria de Posgrado Prof. Dra. Isabel M. Mikulic Secretario de Coordinacin Administrativa Cdor. Ren J. Escobar Secretario de Extensin, Cultura y Bienestar Universitario Lic. Jorge A. Biglieri Secretario de Consejo Directivo Prof. Dr. Osvaldo H. Varela Consejo Directivo Claustro de Profesores: Titulares Prof. Dra. Rossi, Luca A. | Prof. Lic. Faria, Juan J. | Prof. Md. Laznik, David A. | Prof. Dr. Sarmiento, Alfredo J. | Prof. Lic. Neri, Carlos M. | Prof. Lic. Grassi, Adrin C. | Prof. Lic. Peker, Graciela M. | Prof. Dra. Aisenson, Diana B.
Suplentes Prof. Dra. Seidmann, Susana | Prof. Lic. Donghi, Alicia I. | Prof. Lic. Attorresi, Horacio F. | Prof. Dra. Kufa, Mara Del Pilar | Prof. Dr. Lombardi, Gabriel H. | Lic. Stasiejko, Halina A. | T.O. Papiermeister, Ana M. | Dra. Ynoub, Roxana C. Claustro de Graduados Titulares Lic. Sotelo, M. Ins | Lic. Quattrocchi, Paula R. | Lic. Rojas, M. Alejandra | Lic. Celotto, Ileana A.
Suplentes Dr. Korman, Guido P. | Lic. Moraga, Patricia F. | Lic. Llull Casado, Vernica G. | Lic. De La Sovera, Susana L. Claustro de Estudiantes Titulares Srta. Belnicoff, Alexandra | Sr. Panigadi, Marcelo | Sr. Carre, Esteban | Srta. Gasparini, Daniela Suplentes Srta. Ricatti, Sol | Srta. Speranza, Alumin | Sr. Daz Fridman, David | Srta. Pinus, Denise Representante de APUBA Sr. Cabral, Sergio Ediciones de la Facultad de Psicologa - Universidad de Buenos Aires Av. Independencia 3065 - Cdigo Postal C1225AAM Ciudad de Buenos Aires, Repblica Argentina Tel / Fax: (54 11) 4957 5886 Email: [email protected] 3 Autoridades III Congreso Internacional de Investigacin y Prctica Profesional en Psicologa XVIII Jornadas de Investigacin y Sptimo Encuentro de Investigadores en Psicologa del MERCOSUR Presidente Honoraria Decana Prof. Lic. Nlida C. Cervone Presidente Prof. Mg. Martn J. Etchevers Miembros de la Comisin Organizadora Coordinadora de la Comisin Organizadora Prof. Dra. Susana Seidmann Integrantes de la Comisin Organizadora Lic. Mara E. Colombo | Lic. Patricia Alvarez | Dr. Gabriel Lombardi | Lic. Edgardo Etchezahar | Lic. Luis Prieto | Lic. Susana de la Sovera Maggiolo Miembros del Comit Cientco Psicologa Clnica y Psicopatologa | Torricelli, Flavia | Schejtman, Fabin | Pelorosso, Alicia | Glenda, Cryan | Raznoszczyk, Clara Dora | Quesada, Silvia | Psicologa del Trabajo | Leibovich, Nora | Delfno, Gisela | Psicologa Educacional y Orientacin Vocacional | Elichiry, Nora | Legaspi, Leandro | Nakache, Dborah | Perelman, Flora | Chardon Cristina | Stasiejko Halina | Aisenson Gabriela | Bottinelli Marcela | Diana Fernndez Zalazar | Psicologa Social, Poltica y Comunitaria | Azzollini, Susana | Tajer, Debora | Lpez, Mercedes | Montenegro, Roberto | Ana Fernandez | Stefani, Dorina | Virginia Shejter | Mara Pa Pawlowicz | Borakievich, Sandra | Biglieri, Jorge | Psicologa de la Salud, Epidemiologa y Prevencin | Barcala, Alejandra | Castro Solano, Alejandro | Comes, Yahmila | Zaldua Graciela | Stolkiner Alicia | Tcnicas y Procesos de Evaluacin Psicolgica | Aguerri, Mara Esther | Schmidt, Vanina | Cassullo, Gabriela | Fernndez Liporace, Mercedes | Rosenfeld, Nora | Nuez, Ana Maria Del Carmen | Attorresi, Horacio | Psicologa Jurdica | Sarmiento, Alfredo | Puhl, Estela | De la Iglesia, Matilde | Neuropsicologa y Psicologa Cognitiva | Politis, Daniel | Burin, Dbora | Yorio, Alberto | Ferreres Aldo | Psicoanlisis | Sotelo, Mara Ins | Laznik, David | Lowenstein, Alicia | Muoz, Pablo | Quiroga, Susana | Roussos, Andrs | Schejtman, Fabin | Lubian, Elena | Historia de la Psicologa | Dagfal, Alejandro | Ibarra, Florencia | Kirsch, Ursula | Rodrguez Sturla, Pablo | Rossi, Luca | Talak Ana | Psicologa del Desarrollo | Duhalde, Constanza | Grassi, Adrin | Oiberman, Alicia | Paolicchi, Graciela | Barreiro Alicia Viviana | Filosofa y Epistemologa | Ormart, Elizabeth | Rovaletti, Mara Lucrecia | Terapia Ocupacional | Papiermeister, Ana Mara | Estudios Interdisciplinarios y Nuevos Desarrollos | Gutirrez, Carlos | Korman, Guido | Ynoub, Roxana | Pawlowicz, Mara Pa | Carlos Neri | El contenido, opiniones y el estilo de los trabajos publicados, previamente aprobados por el Comit Cientfco son exclusiva responsabilidad de los autores, y no debe considerarse que refeja la opinin de la Facultad de Psicologa de UBA. 5 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA NDICE NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA TRABAJOS LIBRES FALACIA DE LA CONJUNCIN: VARIACIN DE UN PROBLEMA CLSICO DE TVERSKY Y KAHNEMAN Attorresi, Horacio Flix; Garca Daz, Alcira Myriam; Pralong, Hctor Omar ...................................................................................... 7 LAS RELACIONES ENTRE MEMORIA Y TOMA DE DECISIONES: UN ESTUDIO EXPERIMENTAL Azzollini, Susana Celeste; Torres, Jos Alejandro; Depaula, Pablo .................................................................................................. 10 LAS CAPACIDADES COGNITIVAS DE LOS NIOS DE SEIS A OCHO AOS Y SU RELACIN CON EL RENDIMIENTO EN EL REA DE LAS MATEMTICAS EN UNA FUNDACIN DE LA CIUDAD DE SAN SALVADOR DE JUJUY Civila Orellana, Pablo Rolando .......................................................................................................................................................... 15 LA VARIABLE SOCIOECONMICA Y SU RELACIN CON EL RECONOCIMIENTO PRECISO Y RPIDO DE LA PALABRA ESCRITA Cuadro, Ariel; Balbi, Alejandra ........................................................................................................................................................... 21 LOS PROCESOS DE TOMA DE DECISIONES EN ESCENARIOS MULTICULTURALES: LA IMPORTANCIA DE LOS VALORES HUMANOS Depaula, Pablo; Pieyro, Diego Ral; Clotet, Cinthia Ins; Nistal, Mara .......................................................................................... 25 ALTERACIN DE LA RUTA NO LXICA DE LECTURA EN ALEXICOS HISPANOHABLANTES Ferreres, Aldo .................................................................................................................................................................................... 30 CREENCIAS ASOCIADAS AL CONSUMO EN PACIENTES ADICTOS DEL HOSPITAL GENERAL DE AGUDOS TEODORO LVAREZ Lado, Gisela Carina; Grondona, Jeronimo ........................................................................................................................................ 33 ALTERACIONES EN EL PROCESAMIENTO DEL NMERO Y LA REALIZACIN DE CLCULOS: UN ESTUDIO DE CASO Leiva, Samanta Daniela; Jacubovich, Silvia ...................................................................................................................................... 37 LA IMAGEN CORPORAL SENTIDA: SUS AFECTOS, PERCEPCIONES Y CONCEPTUALIZACIONES CONTEMPORNEAS Lolich, Mara ...................................................................................................................................................................................... 41 ALEXIAS EN HISPANOPARLANTES: UNA REVISIN Lopez, Cynthia Valeria ....................................................................................................................................................................... 45 EVALUACIN DE LA DENOMINACIN Y COMPRENSIN DE PALABRAS ABSTRACTAS Y CONCRETAS Margulis, Laura; Ferreres, Aldo ......................................................................................................................................................... 54 EVALUACIN DEL EFECTO MOZART EN MSICOS DE LA BANDA SINFNICA DE LA CIUDAD DE CRDOBA Pernas, Ignacio ................................................................................................................................................................................. 60 EFEITOS DA PRIVAO DE SONO NA PERCEPO VISUAL EM TRABALHADORES EM TURNOS Siebra Soares, Cibele; De Freitas Arajo, Danilo; Moraes De Almondes, Katie ............................................................................... 66 CONSIDERACIONES SOBRE EL ABORDAJE TERAPUTICO MULTIMODAL PARA EL TRATAMIENTO DE TDAH Stelzer, Florencia; Mazzoni, Cecilia; Cervigni, Mauricio; Martino, Pablo ........................................................................................... 70 IMPACTO DE LA CRIANZA SOBRE EL DESARROLLO DE LOS MECANISMOS DE CONTROL COGNITIVO DURANTE LA INFANCIA Stelzer, Florencia; Mazzoni, Cecilia; Cervigni, Mauricio; Martino, Pablo ........................................................................................... 73 EVALUACIN DEL RECONOCIMIENTO FACIAL DE EMOCIONES BSICAS EN ADULTOS MAYORES Tabernero, Mara Eugenia; Politis, Daniel ......................................................................................................................................... 77 6 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA POSTERS PROCESAMIENTO DE LA INFORMACIN EN NIOS CON ALTO Y BAJO ESTRS PERCIBIDO Carrizo, Analia Beatriz; Paez, Amelia Elizabeth; Zanin, Laura Ana; Azpiroz, Rosana; De Bortoli, Miguel Angel .............................. 81 ANLISIS DEL DESEMPEO DE POBLACION NORMAL EN UNA BATERIA COGNITIVA DE EVALUACIN DE PRAXIAS Gmez, Pablo Guillermo; Politis, Daniel ............................................................................................................................................ 83 AVANCES EN LA COMPRENSIN DE LA RELACIN ENTRE COGNICIN LGICA Y PERSONALIDAD Macbeth, Guillermo; Britos, Paola; Grigera, Diana; Razumiejczyk, Eugenia .................................................................................... 85 FUNCIONES CEREBRALES SUPERIORES (FCS) Y VARIABLES DE ANDROGENIZACION PERINATAL (RELACIN ENTRE SEGUNDO Y CUARTO DEDO 2D: 4D) EN MUJERES Perarnau, Paula; Fasulo, Veronica .................................................................................................................................................... 87 INFLUENCIA DE LOS FACTORES SOCIOCULTURALES Y ACTITUD ANTE LA SINTOMATOLOGA PREMENSTRUAL (AFM) Perarnau, Paula; Fasulo, Veronica .................................................................................................................................................... 89 INTERFERENCIA ENTRE REPRESENTACIONES GUSTATIVAS Y AUDITIVAS EN LA MEMORIA OPERATIVA Razumiejczyk, Eugenia; Juregui, Matilde; Grigera, Diana; Britos, Paola; Genovese, Ignacio; Macbeth, Guillermo ....................... 91 ALTERACIONES NEUROPSICOLGICAS EN PACIENTES VULNERABLES AL ESTRS Snchez Negrete, Mara Gabriela; Marro, Claudia Teresa; Mandich, Viviana Carina; Yorio, Alberto ............................................... 93 RECONOCIMIENTO FACIAL DE EMOCIONES COMPLEJAS EN UNA MUESTRA DE ADULTOS MAYORES NORMALES Snchez, Natalia Alejandra; Rubinstein, Wanda ............................................................................................................................... 95 EL ROL DE LOS MARCADORES DEL DISCURSO EN LA COMPRENSIN DE DISCURSO ORAL ESPONTNEO Yomha Cevasco, Jazmin ................................................................................................................................................................... 96 RESUMENES APORTES DE LA BIOLOGA MOLECULAR Y CELULAR A LA FORMACIN DEL PSICLOGO Audisio, Eduardo ............................................................................................................................................................................. 101 ANLISE DA RELAO ENTRE A QUALIDADE DE SONO E A MEMRIA OPERACIONAL EM ESTUDANTES DO ENSINO FUNDAMENTAL De Freitas Arajo, Danilo; Costa, Mnica; Moraes De Almondes, Katie; Pereira, Antonio ............................................................. 102 PREDICTORES DE LA ESCRITURA ORTOGRFICAMENTE CONVENCIONAL Ferroni, Marina ................................................................................................................................................................................ 103 EL APRENDIZAJE DE LA OPERACIN DE SUSTRACCIN Formoso, Jesica; Jacubovich, Silvia ................................................................................................................................................ 104 PROCRASTINACIN ACADMICA Y SU RELACIN CON PERFECCIONISMO Galarregui, Marina; Arana, Fernan; Partarrieu, Andrs ................................................................................................................... 105 BATERA DE EVALUACIN DE ALTERACIONES DE LA COMPRENSIN LECTORA EN ADULTOS. NORMAS LOCALES Sampedro, Mara Brbara ............................................................................................................................................................... 106 EVALUACIN DE UN GRUPO DE PACIENTES LESIONADOS DEL HEMISFERIO DERECHO CON UNA PRUEBA DE COMPRENSIN DE EXPRESIONES IRNICAS Y SARCSTICAS Sampedro, Mara Brbara ............................................................................................................................................................... 107 7 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA FALACIA DE LA CONJUNCIN: VARIACIN DE UN PROBLEMA CLSICO DE TVERSKY Y KAHNEMAN Attorresi, Horacio Flix; Garca Daz, Alcira Myriam; Pralong, Hctor Omar Facultad de Psicologa, Universidad de Buenos Aires taking into account formal probabilistic aspects, that is to say that they gave right answers. The majority of the students stated that their answers were based on the signifcance of the problem (89%) to make their choice of any of the two options Key words Conjunction Probability Signifcance Representativity Existe una gran vinculacin entre los juicios y la toma de decisiones. El decidir supone la existencia de alternati- vas que pueden ser objetos de apreciacin por parte de quienes se hallan en esta situacin, por lo que las deci- siones se basan en los juicios, adems de en el gusto o las preferencias personales. Los juicios son amplia- mente dependientes de los contextos culturales en los que estas apreciaciones se llevan a cabo. El favor o el rechazo de una situacin puede variar segn lo entien- da un individuo u otro de determinado medio social. As mismo, percepcin y juicio se hallan relacionados. Es frecuente que la percepcin acerca del medio por ejem- plo la comodidad o incomodidad o los sentimientos ex- perimentados en torno a una situacin, vale decir, la signifcacin que el individuo otorga a dicha situacin estn ms ligadas a intereses personales que a carac- tersticas fsicas u objetivables que ese medio tiene (Weil-Barais, 1999). El mbito de la toma de decisiones bajo incertidumbre no es ajeno a las caractersticas antes mencionadas. El procesamiento de informacin ya sea en cantidad o compleja o multivariante conduce a la necesidad de dis- minuir la incertidumbre por medio de estrategias no for- malizadas llamadas heursticos (Prez Echeverra, 1988). Los heursticos permiten resolver tareas probabi- lsticas mediante procedimientos de uso habitual en las personas tales como la evaluacin de similitudes, de re- presentatividades, de atribucin de causalidades, etc., arribando mediante su uso a resultados correctos o errneos (Espino Morales, 2004). Un tipo de heurstico es el de Representatividad entendido como una estrate- gia de estimacin probabilstica, que asigna probabili- dad a un suceso basndose en la semejanza del mismo con la poblacin de la cual se extrae, o en el parecido de ste con el proceso por medio del cual se generan los resultados (Kahneman & Tvesky, 1972). RESUMEN Se disearon modifcaciones del problema clsico de Tversky y Kahneman para la identifcacin de la Falacia de la Conjuncin. En el presente trabajo se administr un problema en el que, como es usual, se debe elegir, segn se le atribuya mayor probabilidad, entre la ocu- rrencia de un suceso simple o la ocurrencia simultnea de ese suceso con otro. En este caso se trata de dos opciones desvinculadas del relato del cuerpo del pro- blema. Participaron 146 jvenes, seleccionados por ac- cesibilidad, ingresantes a Universidades Nacionales sin conocimientos previos acerca de probabilidades. A dife- rencia de lo hallado en otros trabajos previos (Attorresi, Garca Daz, Pralong, 2010a y 2010b) se encontr que una minora (36%) eligi la opcin de la conjuncin, que es errnea desde el punto de vista probabilstico. Una mayora (46%) atribuy mayor probabilidad a la ocurren- cia de un nico suceso. Sin embargo, slo un 8% de es- te grupo lo hizo basndose en argumentos formales probabilsticos, es decir brindaron respuestas correc- tas. La mayora de los participantes dieron argumentos en base a la signifcacin del problema (89%) para ha- cer su eleccin de cualquiera de las dos opciones. Palabras clave Conjuncin Probabilidad Signifcatividad Representati- vidad ABSTRACT THE FALLACY OF THE CONJUNCTION: VARIATION OF A CLASSIC PROBLEM BY TVERSKY AND KAHNEMAN Modifcations to the classic problem by Tversky and Kahneman for the identifcation of the conjunction falla- cy were designed. In this study a problem in which, as usual, they must choose between the occurrence of a simple event or the simultaneous occurrence of that event with another was assigned to a group of students. In this case there are two options dissociated from the rubric of the body of the problem. 146 young students chosen from accessibility were applicants to National Universities with no previous knowledge about probabil- ities. Unlike previous results found in research work (At- torresi, Garcia Diaz, Pralong, 2010a and 2010b) it was found that a minority (36 %) chose the option, which is wrong from the probabilistic point of view. A majority (46%) attributed a major probability to the occurrence of a unique success. However, only 8% of this group did it 8 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA A su vez, el heurstico de Representatividad adquiere distintas manifestaciones, una de ellas es la llamada Falacia de la Conjuncin. Esta falacia puede identifcar- se cuando se le pide a un entrevistado que opte entre dos proposiciones teniendo en cuenta cul de ellas es la ms probable. Una de las proposiciones est referida a la ocurrencia de un suceso A y la otra est referida a la ocurrencia simultnea de ese suceso A y otro B (ver Diseo de Actividades). Las leyes de las probabilidades conducen a la respuesta correcta consistente en que la ocurrencia de un solo suceso es ms probable que la ocurrencia de la conjuncin de ese suceso con otro. En el presente trabajo, ambas proposiciones, si bien estn contextuadas en situaciones con signifcado, stas se hallan completamente desvinculadas en cuanto al signi- fcado, de la informacin inicial proporcionada al partici- pante. El heurstico de representatividad (Tversky & Kahneman, 1982 y 1983) se manifesta de modo distin- to que en otras presentaciones del problema (ver Atto- rresi, Garca Daz, Pralong, 2010a y 2010b) en compati- bilidad con lo sostenido por la teora de probabilidades, aunque esta concordancia no sea necesariamente una manifestacin de un pensamiento correcto. Mtodo Diseo de Actividades Se dise una actividad modifcando la forma clsica del problema de Tversky y Kahneman (1982) para la identifcacin del Sesgo de la Conjuncin. Problema Clsico de Tversky y Kahneman (PC) Linda tiene 31 aos es soltera, extrovertida y muy bri- llante. Se licenci en flosofa. En sus tiempos de estu- diante, estuvo profundamente comprometida con asun- tos de discriminacin y justicia social, y particip tam- bin en manifestaciones antinucleares. Cul de las si- guientes afrmaciones sobre Linda es ms probable? 1) Es cajera de un banco. 2) Es cajera de un banco y una activista del movimiento feminista. RESPUESTA Y JUSTIFICACION: Se pueden esquematizar las dos afrmaciones expues- tas como opciones para el Problema Clsico teniendo en cuenta si dichas proposiciones estn vinculadas al enunciado (S) o si no lo estn (N) de la siguiente forma: a) N b) N y S Se reformul el Problema Clsico en otra presentacin mantenindose invariante el enunciado introductorio. En el Problema Modifcado se proponen como opciones dos afrmaciones no vinculadas al enunciado introductorio. Problema Modifcado No vinculado con el enunciado in- troductorio (PM): Linda tiene 31 aos es soltera, extrovertida y muy bri- llante. Se licenci en flosofa. En sus tiempos de estu- diante, estuvo profundamente comprometida con asun- tos de discriminacin y justicia social y particip tam- bin en manifestaciones antinucleares. Cul de las si- guientes afrmaciones sobre Linda es ms probable? 1) Es cajera de un banco. 2) Es cajera de un banco y le gusta jugar al jockey. RESPUESTA Y JUSTIFICACION: La representacin esquemtica para el Problema Modi- fcado desde el punto de vista de su vinculacin con el enunciado introductorio tiene la forma: a) N b) N y N Participantes Se administr el reactivo a 146 jvenes ingresantes a Universidades Nacionales pblicas de Capital y Gran Buenos Aires, sin conocimientos previos acerca de pro- babilidades, provenientes de colegios pblicos y priva- dos de nivel socioeconmico medio. La muestra fue se- leccionada por accesibilidad. Resultados La distribucin de frecuencias en porcentajes para el Problema Modifcado es la siguiente: para la opcin 1) es del 46%, para la 2) es 36% y hubo un 18% de partici- pantes que no se decidieron por ninguna opcin o no contestaron La opcin 1) se refere a la ocurrencia de un nico suceso. 1) Es cajera de un banco. Esta opcin es siempre ms probable que la opcin 2) referida a la ocurrencia simultnea del suceso mencio- nado en 1) con otro distinto. 2) Es cajera de un banco y le gusta jugar al jockey. Es decir la opcin correcta a elegir, al igual que en el Problema Clsico, es la 1) desde el punto de vista pro- babilstico. Segn la teora de Probabilidad P(A) P(AB) y en particular para el problema presentado la desigual- dad es estricta por los tipos de eventos enunciados. Si se analizan para el Problema Modifcado los porcen- tajes de eleccin de las opciones se observa que la op- cin 1) fue mayoritariamente elegida frente a la opcin 2). Esta ltima es la que corresponde a la probabilidad de la conjuncin que, como se sealo anteriormente, es la opcin incorrecta desde el punto de vista formal pro- babilstico. Estos resultados contrastan con los encon- trados en la presentacin del Problema Clsico de Tver- sky y Kahneman para el que la opcin 1) fue minoritaria- mente elegida por los participantes (25%) frente a la op- cin 2) (70%). Otra diferencia encontrada es que, en el Problema Clsico, fue ms bajo el porcentaje de partici- pantes que no se decidieron por ninguna opcin o no contestaron (5%) (Attorresi et al, 2010a). Para el caso del PM se puede advertir que el heurstico de representatividad se manifesta de modo diferente que en el PC (elegir la opcin 2) que sealan Tversky y Kahneman como la Falacia de la Conjuncin. Para el PM es ms representativo del enunciado sobre Linda, elegir la opcin 1), no coincide con la eleccin de la con- juncin, mientras que para el PC elegir la conjuncin re- sulta lo ms representativo del enunciado introductorio (ver discusin). 9 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA Vale destacar que de los que eligieron la opcin 1), en un mnimo porcentaje del 8% lo hicieron abstrayndose del contenido del reactivo y llegaron a la respuesta co- rrecta desde el punto de vista formal probabilstico. El resto eligi la opcin 1) desde el punto de vista del sig- nifcado sin tener en cuenta la lgica de probabilidades. A continuacin se presentan ejemplos textuales sin co- rreccin gramatical de estos dos modos de eleccin de la opcin 1): Ejemplo 1 (justifcacin correcta): 1) Es cajera de un banco, ya que en las dos afrmaciones aparece que es cajera de un banco, entonces cajera de un banco tiene ms probabilidades que sea. Ejemplo 2 (justifcacin incorrecta - vinculado al signif- cado): 1) Es cajera de banco. Se ocupa de sus asuntos no tiene tiempo de jugar al hockey. Se resigna como to- da la sociedad. Tambin se muestran algunos ejemplos textuales de ar- gumentos brindados para justifcar la eleccin de la op- cin 2). Ejemplo 3 (justifcacin que agrega supuestos ajusta- dos al enunciado introductorio): Porque el hecho de ser cajera no le imposibilita jugar hockey. Tampoco el de- porte va contra su supuesta ideologa. Ejemplo 4 (justifcacin que agrega supuestos fabula- dos respecto del enunciado introductorio): Mi intuicin me indica que es una chica con mucha decisin y le gusta entretenerse en su tiempo libre, disfrutando de su soltera. Discusin Contrariamente a lo ocurrido para el Problema Clsico, en el Problema Modifcado, la opcin 1) fue la ms ele- gida por los participantes. Las argumentaciones brinda- das para esta eleccin fueron diversas, en una escasa proporcin correspondieron a un pensamiento formal probabilstico (respuestas correctas). Sin embargo, la mayora de los que eligieron esta opcin 1) lo hicieron desde la signifcacin. Las dos opciones para este reac- tivo estn completamente desvinculadas del enunciado introductorio acerca de Linda, pero en una de ellas se da ms cantidad de informacin desvinculada (cajera de banco y jugadora de jockey) que en la otra (cajera de banco). En esta presentacin la representatividad de lo afrmado se basa en equivocarse lo menos posible y es- to tiene lugar cuando se sostiene la ocurrencia de un slo suceso no vinculado al relato introductorio. As es como se manifest el heurstico de representatividad para este Problema Modifcado, es decir, es ms repre- sentativa de lo expresado acerca de Linda la opcin 1) (menos probabilidad de equivocarse) que la 2) en la que aparecen ms sucesos no mencionados en el enuncia- do introductorio e incluso considerados incompatibles con el relato previo. Para el Problema Modifcado el punto de vista de la sig- nifcacin en cuanto a posibilidad de prediccin acerca de la factibilidad de un suceso nuevamente coincide con el heurstico de representatividad ya que dado que las opciones no se vinculan en cuanto al signifcado con el relato previo es preferible elegir la opcin 1) que con- tiene menos informacin no sealada en la introduccin del problema. Por otra parte la opcin 1) sigue siendo la opcin correcta desde el punto de vista probabilstico y est en coincidencia con los criterios de la reprentativi- dad y de la signifcacin. Esta coincidencia de criterios se vio refejada en el alto porcentaje de eleccin para la opcin 1) (46% frente a 36% para la 2) ) en el Problema Modifcado. BIBLIOGRAFA Attorresi, H.; Garca Daz, A. y Pralong, H. (2010a) Falacia de la Conjuncin: Sesgo del pensamiento o prevalencia de la signif- cacin? Memorias del II Congreso Internacional de Investigacin y Prctica Profesional en Psicologa. XVII Jornadas de Investiga- cin. Facultad de Psicologa, UBA. Attorresi, H.; Garca Daz, A. y Pralong, H. (2010b) Una modifca- cin de un problema clsico de Tversky y Kahneman. Memorias del Segundo Encuentro de Docentes e Investigadores de Esta- dstica en Psicologa. Facultad de Psicologa, UBA. Espino Morales, O. (2004). Pensamiento y Razonamiento. Madrid, Pirmide. Perez Echeverra, M (1988). Psicologa del Razonamiento Proba- bilstica. Madrid, Universidad Autnoma. Kahneman, D. & Tversky, A. (1972). Subjective probability: a jud- gement of representativeness. Cognitive Psychology, 3, 430-454. Tvesky, A. & Kahneman, D. (1982). Judgments of and by repre- sentativeness, en Kahneman, D., Slovic, P. & Tversky, A. Judgment under uncertainty: heuristics and biases. Cambridge: University Press.84-98. Tvesky, A. & Kahneman, D. (1983). Extensional versus intuitive reasoning: the conjunction fallacy in probability judgment. Psycho- logical Review, 90, 293-315. Weil-Barais, A. (1999). El Hombre cognitivo. Buenos Aires, Do- cencia. 10 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA LAS RELACIONES ENTRE MEMORIA Y TOMA DE DECISIONES: UN ESTUDIO EXPERIMENTAL Azzollini, Susana Celeste; Torres, Jos Alejandro; Depaula, Pablo CONICET - Ministerio de Defensa. Argentina ess employed would be more related to the individual style than with the situation which peacemakers have to face to. In addition, the making decision process is relat- ed to the memories that come to mind during the deci- sion. In intuitive decisions most of the memories are se- mantic; while in the analytic decision process also auto- biographic memories come to mind. Key words Autobiographical Memory Decision Uncertainly I. Introduccin: Las decisiones estratgicas se desarrollan a partir de informaciones no relacionadas de manera lineal, es por ello que quienes las toman trabajan sobre la base de posibilidades y supuestos (Levy, 2007). Este des- pliegue cognitivo presenta tres momentos: la percep- cin de lo que sucede, la comprensin del futuro por enfrentar y el razonamiento para tomar la decisin (Dane & Pratt, 2007). Justamente, los nuevos escenarios de incertidumbre sociocultural y/o ambiental, derivados de un desastre o catstrofe humanitaria, que subyacen a determinadas reas de conficto internacional intervenidas por la Or- ganizacin de las Naciones Unidas (ONU) donde se desempean voluntarios en misiones de paz, deman- dan una permanente toma decisiones para mantener el orden institucional y proteger a la poblacin local. Las investigaciones ms recientes sobre los procesos de toma de decisiones se han focalizado sobre los ses- gos cognitivos (Das & Teng, 1999), la ambigedad de responsabilidades, la experiencia del decisor (Langley et al., 1995), las amenazas competitivas, la percepcin de control del ambiente (Dean & Sharfman, 1996), las argumentaciones racionales (Werder, 1999) y la evalua- cin de aspectos tcticos u operativos (Nutt, 1998); centrndose en los procesos cognitivos, sociales y pol- ticos propios de la toma de decisiones estratgicas (Da- ake et al., 2004) y sugiriendo que la cantidad de infor- macin reunida debera variar de acuerdo con el grado de incertidumbre que reviste el contexto (Makadok & Barney, 2001). Es decir que, la estrategia demanda un cierto grado de refexin consciente o metaconocimiento necesario pa- ra la seleccin y planifcacin de procedimientos efca- ces y la evaluacin del xito o fracaso de la decisin (Pozo Municio, 2003). Sin embargo, Mintzberg (1991) destaca que una estra- RESUMEN Quienes se focalizan en la toma de decisiones de tipo analtico rechazan la intuicin como medio para lograr soluciones a problemas inestructurados (Nutt, 1998), mientras que otros consideran que la intuicin resulta ef- caz para tomar decisiones en situaciones complejas (Langley et al., 1995). Se est desarrollando una investi- gacin experimental con el objetivo de analizar las rela- ciones entre la memoria y la toma de decisiones en con- textos inciertos. Se seleccion una muestra no probabi- lstica intencional de 44 voluntarios de una misin de paz que fueron aleatorizados para intervenir en dos situacio- nes experimentales de alta y baja incertidumbre cultural sobre las que debieron tomar decisiones. Primero, se les administr una batera de tests psicomtricos y luego fueron entrevistados sobre su performance durante las situaciones experimentales. Los datos fueron analizados estadsticamente (SPSS 15.0). Los resultados indican que el tipo de toma de decisiones se hallara relacionado en mayor medida con el estilo predominante de la perso- na que con la clase de situacin a la que se enfrenta. Adems, el tipo de toma de decisiones est asociado al recuerdo evocado durante el acto decisorio: en las deci- siones intuitivas se utilizan ms recuerdos semnticos, mientras que en las analticas, parecen activarse tam- bin recuerdos autobiogrfcos. Palabras clave Memoria Autobiogrfca Decisiones Incertidumbre ABSTRACT THE RELATIONSHIP BETWEEN MEMORY AND MAKING DECISIONS PROCESS: AN EXPERIMENTAL STUDY People who consider the making decision process in an analytic generally reject intuition as a successful of solv- ing unstructured problems (Nutt, 1998). Others consider that intuition is more suitable to make decisions in com- plex situations (Langley et al., 1995). The aim of this re- search is analyzing the infuence that memory has in the making decisions process under uncertain cultural envi- ronments. It has been selected a non probabilistic and intentional sample of 44 peacekeepers. There were as- signed at random in two different experimental situa- tions: they have to make decisions in a low uncertainty context and in a high uncertainty one. Firstly, a psycho- metric battery was administered. Secondly, they were interviewed about their performance in both experimen- tal situations. The data was statistically analyzed with SPSS 15,0. Results: The kind of decision making proc- 11 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA tegia totalmente deliberada imposibilita el aprendizaje; mientras que una emergente (sin planifcacin) lo pro- mueve, ya que se consolidan patrones resultantes de un aprendizaje estratgico. Asimismo, los hallazgos de Simon (1947, 1987) muestran, al distinguir entre procesos lgicos y procesos no-lgicos, que la in- tuicin involucrada en una estrategia emergente es un anlisis cristalizado en hbito y en capacidad para res- ponder rpidamente por medio del reconocimiento; re- sultando efcaz para tomar decisiones en contextos complejos e inciertos. Mintzberg et al. (1998) establecen que la intuicin co- rresponde a una sntesis inconexa de fragmentos de memoria que se consolidan en una nueva estructura de informacin. Asimismo, desde una perspectiva de pro- cesamiento dual, Epstein (1994) ha desarrollado la Teo- ra Cognitiva Experiencial del Self (CEST), la cual esta- blece que existen dos sistemas paralelos de procesa- miento de la informacin: cognitivo (racional-analtico) y experiencial (equivalente a la intuicin); este ltimo, fun- ciona independientemente del sistema racional que sustenta la modalidad analtica de procesamiento. Eps- tein et al. (1996) observan que los heursticos respon- den a estampas o vietas determinadas primariamente por procesamiento experiencial (intuitivo) pero infuen- ciados, en menor medida, por procesamiento racional. Por otro lado, a travs de un abordaje cognitivo-afectivo y neurocientfco, Allinson y Hayes (1996) describen a las intuiciones como juicios inmediatos basados en sen- timientos y en la adopcin de una perspectiva global. Damasio (1999) por su parte, considera a las intuiciones como indicadores somticos y destaca la relevancia del rol de la emocin en la toma de decisiones. Diversos investigadores (Sinclair & Ashkanasy, 2005; Dane & Pratt, 2007; Hodgkinson et al., 2008; citados por Sadler-Smith & Sparrow, 2008), que han realizado aportes en el rea de la psicologa social, la psicologa cognitiva y las neurociencias, acuerdan en que la intui- cin constituye un fenmeno experiencial basado en cierta reserva de conocimiento implcito, implicando una compleja interaccin de procesos cognitivos y afectivos, y que opera en un plano que se haya por de- bajo del nivel conciencia. Es decir, que los procesos de intuicin implican un procesamiento rpido y hols- tico de la informacin representado por manifestacio- nes afectivas en la forma de presentimientos o sen- timientos viscerales, y cierto grado de certeza (Sa- dler-Smith & Sparrow, 2008). En sntesis, las diversas perspectivas tericas que han procurado la profundizacin de los primeros hallazgos de Simon, consideran que emocin, imaginacin y me- moria, ocasionalmente se combinan bajo la forma de in- sights que conducen los procesos de toma de decisio- nes (Langley et al., 1995). De hecho, Swink (1995) considera a la intuicin como una habilidad para resolver problemas visualizando las causas de una situacin dada. Ms recientemente, Bol- te y Goschke (2005) acuerdan con que la intuicin cons- tituye una habilidad para emitir juicios acerca de las pro- piedades de estmulos sobre la base de informacin ac- tivada en memoria, pero de forma no conscientemente recuperada. Este fenmeno se vincula con la distincin propuesta por Tulving (1972) entre memoria episdica y memoria semntica. En la recuperacin de informacin semnti- ca el sujeto no es consciente del contexto en que se ad- quiri ese conocimiento. Sin embargo, una de las carac- tersticas principales de la memoria episdica es preci- samente que el sujeto es consciente de estar recordan- do una experiencia previa (Tulving, 1983). En el primer caso se habla de experiencia de conocimiento y en el segundo caso de experiencia de recuerdo. De esta for- ma, el reconocimiento perceptivo (tarea de memoria se- mntica) no requiere que el sujeto sea consciente de que est recuperando para que aparezcan efectos del almacenamiento previo. El reconocimiento por identifcacin es una tarea de memoria episdica, ya que depende de que se haya for- mado una huella episdica; mientras que el reconoci- miento perceptivo es una tarea de memoria semntica que depende solamente del nivel de activacin de la re- presentacin semntica del tem evaluado (Jacoby y Dallas, 1981). Respecto a dicha activacin de memorias, Jacoby y Da- llas (1981) proponen que una tarea de reconocimiento puede realizarse mediante juicios sobre la fuidez per- ceptiva o mediante procesos de toma de decisin que implican la recuperacin del contexto en que se codifc la informacin. El reconocimiento perceptivo se lleva a cabo slo mediante juicios de fuidez perceptiva, mien- tras que para realizar un reconocimiento por identifca- cin es imprescindible la recuperacin del contexto. De los experimentos de Tulving (1985) y Gardiner (1988) se puede deducir que pedir explcitamente a los sujetos que juzguen en sus recuerdos el grado de implicacin de su conciencia autonotica no plantea difcultades, siendo capaces de discriminar entre tems recordados e tems sabidos. Estos datos proporcionan informacin acerca de cualidades fenomenolgicas de los recuer- dos que aportan informacin valiosa sobre qu recupe- ran los sujetos para realizar una tarea, esto es, sobre sus experiencias de recuperacin. I. Objetivo e hiptesis: Objetivo: Analizar la infuencia de la memoria sobre la toma de decisiones en contextos caracterizados por la incertidumbre cultural. Hiptesis: - En la situacin de mayor incertidumbre, ser ms pro- bable que los participantes realicen una toma de deci- sin de tipo intuitiva; e inversamente, en la de menor in- certidumbre, una de tipo analtica. - Existir un efecto de interaccin entre el estilo de toma de decisiones habitual de los participantes y la situacin experimental sobre el tipo de toma de decisiones duran- te la misma. - Durante una toma de decisiones de tipo intuitiva ser ms probable que los participantes activen recuerdos 12 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA semnticos y en una de tipo analtica, recuerdos auto- biogrfcos. II. Metodologa: Tipo de estudio: experimental expost-facto. Sujetos y muestra: Se seleccion una muestra no pro- babilstica intencional de la que participaron 44 volunta- rios que fueron aleatorizados para intervenir en dos si- tuaciones experimentales de alta y baja incertidumbre cultural sobre las que debieron tomar decisiones. Tcnicas e instrumentos: Previamente a la aplicacin de los tratamientos experimentales, se les administr una batera de test psicomtricos integrada por los si- guientes instrumentos estandarizados que fueron con- trabalanceados: Cultural Intelligence Scale (CQS) (Ang et al., 2007), Cuestionario de Estilos de Liderazgo (CE- LID) (Castro Solano, Nader y Casullo, 2004), Cuestiona- rio de Valores Contextualizados (VAL) (Casullo y Castro Solano, 2004) y Escala de Toma de Decisiones Opera- tivas (ETDO) que corresponde a una adaptacin reali- zada ad hoc sobre los tems propuestos en la Encuesta de Conocimiento Tcito (Daake, Dawley & Anthony, 2004) para evaluar el estilo de toma de decisiones. Los tratamientos experimentales consistieron en situacio- nes simuladas (check point) en la que dos actores inter- pretaban a lugareos que pasaban por un puesto de control, en una stos actuaban normalmente (grupo control) y en la otra uno de ellos presentaba conductas tpicas de la religin haitiana (grupo experimental). Pos- teriormente a los tratamientos, fueron entrevistados so- bre su performance, solicitndoles informacin sobre las estrategias que haban utilizado al tomar la decisin (ms pensada y analizada o ms sentida y visceral) y si durante este proceso haban utilizado juicios de sa- ber o juicios de recordar. Anlisis de los datos: En funcin de las respuestas en las entrevistas la informacin fue tipifcada como: deci- sin analtica o intuitiva y evocacin de recuerdos se- mnticos o autobiogrfcos. Luego todos los datos obte- nidos fueron analizados estadsticamente con el soft- ware SPSS 15.0, versin castellana. III. Resultados Tabla I. Resultados del anlisis discriminante de la toma de decisin realizada durante la situacin experimental, segn el estilo decisorio preponderante Tipo de proceso decisorio utilizado en la situacin experimental Media del estilo preponderante Desvo estndar N Analtico 7,46 4,71 26 Intuitivo 2,33 6,46 18 Total 5,36 5,99 44 Tipo de proceso decisorio utilizado en la situacin experimental Probabilidades previas segn grupo Analtico ,591 Intuitivo ,409 Prediccin clasificatoria a
Original Tipo de proceso decisorio Prediccin de pertenencia al grupo
Total Analtico Intuitivo f Analtico Intuitivo Total 24 8 12 2 10 3 26 18 15 % Analtico Intuitivo Total 92,3 44,4 80 7,7 55,6 20 100 100 100 77,3% de los casos de los grupos originales correctamente clasifcados En las tablas precedentes se observa que quienes to- maron una decisin de tipo analtica presentaron una media de estilo preponderante de 7,46 en tanto que quienes asumieron una de tipo intuitiva evidenciaron una media de 2,33, siendo estas diferencias estadsti- camente signifcativas (correlacin cannica r= .426; = 0,819 y p= 0.004). En cuanto a la capacidad predictiva del estilo decisorio preponderante sobre el tipo de toma de decisin asumi- da al momento de enfrentarse a una situacin, se ob- serva que la probabilidad previa es de 59,1% para el proceso analtico y al considerar la variable estilo pre- ponderante la probabilidad de acierto del modelo as- ciende a 77,3%. Tabla II. Resultados del anlisis de asociacin de Chi cuadrado de la toma de decisin realizada durante la si- tuacin experimental, segn el grupo experimental
Tipo de situacin experimental
Total Sin incerti- dumbre Con incertidum- bre
Tipo de proceso decisorio utilizado en la situacin experi- mental
Analtico f 12 14 26 % de tipo de Situacin
52,2%
66,7%
59,1%
Intuitivo f 11 7 18 % de tipo de Situacin
47,8%
33,3%
40,9% f 23 21 44 Total % de tipo de Situacin
100%
100%
100% Un 52,2% de quienes participaron de una situacin sin incertidumbre utilizaron un proceso de tipo analtico al igual que un 66,7% de los que participaron del grupo ex- perimental en la situacin con incertidumbre. Del mis- mo modo, existen escasas diferencias porcentuales en- tre ambos grupos respecto a la toma intuitiva de deci- siones (47,8% y 33,3%, respectivamente). No existiendo diferencias estadsticamente signifcati- vas al respecto ( 2 = 0,954 y p=0.33). Es decir, que no puede considerarse que exista asocia- cin entre ambas variables. 13 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA Tabla III. Resultados del anlisis de asociacin de Chi cuadrado del tipo de memoria involucrada en el proce- so segn la toma de decisin realizada durante la situacin experimental
Tipo de proceso decisorio utilizado en la situacin experimental
Total Analtico Intuitivo Tipo de memoria Semntica f 11 15 26 % de tipo de proceso decisorio
42,3%
83,3%
59,1% Autobio- grfca f 15 3 18 % de tipo de proceso decisorio
57,7%
16,7%
40,9% f 26 18 44 Total % de tipo de proceso decisorio
100%
100%
100% Un 83,3% de quienes realizaron un proceso decisorio in- tuitivo utilizaron recuerdos semnticos durante el mismo, en tanto que un 57,7% de los que realizaron uno de tipo analtico activaron tambin recuerdos autobiogrfcos. Estas diferencias son estadsticamente signifcativas ( 2 = 7,406 y p= 0.012), por lo que puede afrmarse que el tipo de recuerdo involucrado est asociado al proce- so decisorio realizado (con una fuerza de asociacin de Phi= 0,49). IV. Conclusiones Estos resultados preliminares indican que el tipo de to- ma de decisiones se hallara relacionado en mayor me- dida con el estilo predominante de la persona que con la clase de situacin a la que se enfrenta. De hecho, no se han encontrado diferencias estadsticamente signif- cativas entre el tipo de toma de decisiones segn la condicin experimental. Es decir que puede considerar- se que existe cierta estereotipia en la toma de decisio- nes, dado que los participantes no modifcaban su ac- cionar en funcin de las variables contextuales. Estos hallazgos pueden vincularse a la fjacin funcional pos- tulada por Dunker en 1945. S se encontr que el tipo de toma de decisiones est asociada a la activacin de distintas redes mnmicas durante el acto decisorio: al tomar una decisin intuitiva parecen utilizarse en mayor medida recuerdos semnti- cos, mientras que al tomar una de tipo analtica parecen surgir tambin recuerdos autobiogrfcos. Este hallazgo resulta razonable, ya que los recuerdos de reconoci- miento ms automticos correspondientes a la memo- ria semntica, de acuerdo a juicios de conocer, son ac- tivados prioritariamente con un tipo intuitivo de toma de decisiones, basado en una comprensin no-secuencial y holstica acorde a un sistema de procesamiento de ca- rcter sinttico e integrativo. En cambio, los recuerdos de identifcacin ms deliberados y de proceso contro- lado correspondientes a la memoria autobiogrfca, de acuerdo a juicios de recordar, estuvieron relacionados con un tipo racional de toma de decisiones, basado en una comprensin secuencial vinculada a un sistema de procesamiento analtico. No obstante, otros factores debern analizarse en el contexto del presente estudio: a) la experiencia previa de los participantes, ya que resulta razonable suponer que cuando es necesario resolver problemas en un contexto de incertidumbre se activen recuerdos auto- biogrfcos de eventos en contextos similares o bien re- cuerdos semnticos cuando no existen experiencias previas; b) la efcacia de la decisin tomada, dado que una mayor informacin contextual y ms referencias au- tobiogrfcas requieren de un procesamiento ms deli- berado y controlado, en el cual puede difcultar una eleccin adecuada cuando existe presin de tiempo pa- ra tomar la decisin. En este sentido, un proceso de to- ma de decisiones ms intuitivo podra resultar ms efec- tivo (Bolte y Goschke, 2005), dado que se presenta a travs de rpidas asociaciones no-concientes y holsti- cas (Dane y Pratt, 2007); c) las emociones asociadas al momento de tomar la decisin, ya que stas son recu- peradas rpidamente y podran servir de gua de los procesos racionales decisorios (Sadler-Smith & Spa- rrow, 2008). 14 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA BIBLIOGRAFA Allinson, C.W. & Hayes, J. (1996) The Cognitive Style Index: A Measure of Intuition-Analysis for Organizational Research. Journal of Management Studies, 33(1), 119-135.Bolte y Goschke (2005) Ang, S., Van Dyne, L., Koh, C., Yee Ng, K., Templer, K. J. Tay, C. & Anand Chandrasekar, N. (2007). Cultural Intelligence: Its mea- surements and effects on cultural judgments and decision making, cultural adaptation and task performance. Management and Or- ganization Review, 3(3), 335-371. Bolte, A. & Goschke, T. (2005). 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Argentina lyzed by using SPSS program. The results showed that (the Intelligence quotients Full Scale combines the ver- bal scale scores and the performance obtained in the WISC-III) maintains a linear relationship with the mathe- matics. So the child to get a higher score on this scale they may get better performance. Key words Cognitive abilities Mathematics Children La investigacin se realiz en el mbito de una Funda- cin de nuestra ciudad la cual abri sus puertas en el ao 1998 plantendose como objetivo principal ofrecer contencin a chicos de la calle de nuestra ciudad; brin- dndoles asistencia alimenticia, indumentaria y apoyo escolar. A la institucin asisten un total de 100 nios, 17 de los mismos poseen una edad comprendida entre los seis y ocho aos. Ellos concurren diariamente a clases de apoyo escolar a contra turno. Esta poblacin confor- m el objeto de estudio para la presente investigacin. A partir de entrevistas realizadas a las maestras de la institucin se pudo conocer que los nios de la franja etaria mencionada son los que poseen mayores proble- mas de Aprendizaje y de conducta, lo cual me llev a decidir formalmente el objeto a estudiar. La principal problemtica que se visualiza en el aprendizaje de los nios es en el rea de las Matemticas, especialmente en las divisiones de nmeros enteros. Aparecen tam- bin difcultades en el rea Lengua pero en menor pro- porcin y corresponderan a un anlisis diferente. Las docentes argumentan que estas difcultades se de- ben a mltiples causas, mencionando entre ellas: la fal- ta de contencin por partes de sus padres en el hogar, la ausencia de acompaamiento de los mismos, la falta de estimulacin, el cansancio por haber desarrollado ta- reas laborales, la desnutricin, la escasez de materiales escolares necesarios para realizar las tareas, la insuf- ciente instruccin de los padres, entre otras, siendo es- tas las ms importantes. En este marco se toma como problema de investiga- cin: El anlisis de las capacidades cognitivas de los nios de seis a ocho aos y su relacin con el rendi- RESUMEN La hiptesis de trabajo con la que se encaro el presen- te trabajo consista en suponer que las capacidades cognitivas de los nios inciden en el rendimiento en Ma- temticas. Para analizar este supuesto se trabajo con los nios de seis a ocho aos de edad que concurren a una Fundacin de la ciudad de San Salvador de Jujuy (Prov. de Jujuy) durante el ao 2010. A estos nios se les administro la Escala de Evaluacin de Inteligencia para nios WISC-III de Wechsler (empleando el baremo de la prov. de Tucumn). Una vez terminada el ciclo lec- tivo se analizo la posible relacin entre los resultados obtenidos en dicha tcnica con el rendimiento en Mate- mticas (se solicit el boletn de califcaciones) de los cuatro bimestres y el promedio fnal. Dichos datos fue- ron analizados estadsticamente mediante el empleo del programa SPSS. Los resultados demostraron que el CIEC (Cociente Intelectual de Escala Completa, que combina tanto las puntuaciones de la escala verbal y de ejecucin obtenidas en el WISC-III) mantiene una rela- cin lineal con el rea de las Matemticas, es decir, el nio al obtener una mayor puntuacin en esta escala es posible que obtenga un mejor rendimiento. Palabras clave Capacidades cognitivas Nios Matemticas ABSTRACT COGNITIVE SKILLS OF CHILDREN OF SIX TO EIGHT YEARS AND THEIR RELATIONSHIP TO PERFORMANCE IN THE AREA OF MATHEMATICS ON A FOUNDATION OF THE CITY OF S. S. THE JUJUY Suppose that the childrens cognitive abilities affect the performance in Mathematics. To analyze this course is work with children from six to eight years old who attend a Foundation of San Salvador de Jujuy in 2010. These children were administered the Scale for Evaluation of Childrens Intelligence WISC-III Wechsler, (using the scale of the prov. Tucumn). also once the school year ended analyzing the possible relationship between the results of these techniques with the performance in Mathematics (ask for the report card). of the four quarter and the fnal average. These data were statistically ana- 16 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA miento de las Matemtica en una Fundacin de la ciu- dad de S. S. de Jujuy. Cabe la aclaracin que no se tendrn en cuenta al mo- mento del anlisis todos los supuestos manifestados por los docentes, pero si se har nfasis en algunos de ellos. A partir de ello, y a los fnes de este estudio se propone: Conocer como las capacidades cognitivas en los ni- os de seis a ocho aos que asisten a la Fundacin inciden en el desempeo escolar en el rea de las Matemticas. En consecuencia, el eje de la investigacin se centrara en el siguiente interrogante: Existe una relacin entre las capacidades cognitivas de los nios y el rendimiento escolar en el rea de las Matemticas? Las escuelas rigen sus programas acadmicos por los CBC (Contenido Bsicos Comunes). Estos encuentran sus fundamentos cientfcos epistemolgicos principal- mente en las teoras de J. Piaget entre otros. A los fnes de este trabajo se tomaron en cuenta los aportes de la teora Psicogentica de J. Piaget y los de D. Wechsler para abordar la dimensin cognitiva de los nios. Piaget, J. (1959) plantea la necesidad de ayudar a los nios a promover el desarrollo de sus capacidades cognitivas construyendo conocimientos sobre los facto- res que inciden en ellos, brindando espacios de com- prensin desde el nivel primario. La eleccin del rea de las Matemticas como espacio curricular donde realizar la investigacin surge de la in- quietud de considerar que las capacidades cognitivas en los sujetos van ms all de esta disciplina en si misma. A las Matemticas se las puede pensar como base en di- versas ciencias puesto que favorecen el conocimiento y razonamiento. El manejo de esta disciplina en si mismo, adems, permite descubrir mltiples respuestas para un mismo problema desde las cantidades y las formas de relaciones, as como su evolucin en el tiempo. En el modelo educativo que se infere a partir de la in- vestigacin, donde se prioriza la memorizacin y se de- ja de lado el anlisis, el lugar ocupado de la ciencia, de la tcnica y de las Matemticas no ha hecho otra cosa que crecer. No basta con saber leer, escribir y hacer cuentas, es necesario poder expresarse oralmente y por escrito sobre temas complejos y poder discutir so- bre ellos, hay que dominar tambin tcnicas sofstica- das, para las que se exigen conocimientos matemticos referidos a las grandes estructuras de la aritmtica, del algebra, del anlisis y de la geometra, tcnicas que ha- ce un siglo estaban limitadas a un crculo restringido. Adems se puede defnir a las Matemticas como a un rea de conocimiento que busca la comprensin de los conceptos y procedimientos que la escuela est social- mente comprometida a impartir. Comprensin que ase- gura que los contenidos aprendidos puedan ser aplica- dos a situaciones nuevas, surgidas desde otros mbitos aun ajenos al rea, reinterpretndolos en los contextos culturales en que se presenten, donde se evidencia el desarrollo cognitivo del sujeto. Piaget, J. (1964) da cuenta de cmo se produce el desa- rrollo de las estructuras cognitivas relacionando los cua- tro factores de crecimiento y maduracin: el primero de ellos es la maduracin -por tanto un factor interno, es- tructural, pero hereditario-, el segundo, la infuencia del medio fsico, de la experiencia o ejercicio, el tercero, la in- teraccin social y el cuarto la bsqueda del equilibrio. Un aporte complementario al de Piaget es el de David Wechsler (Cohen, R. y Swerdlik, M. 2001) quien defne a la inteligencia en forma operacional, como la capaci- dad integral o global del individuo para actuar con deter- minacin, para pensar en forma racional y enfrentarse de manera efectiva con su ambiente. Es integral o glo- bal debido a que est compuesta de elementos o capa- cidades que, aunque no son independientes por com- pleto, son diferenciales desde el punto de vista cualita- tivo. Con la medicin de estas capacidades, al fnal eva- luamos la inteligencia. Pero la inteligencia no es idnti- ca a la simple suma de estas capacidades, sin embar- go, la nica manera en la que podemos evaluarla en for- ma cuantitativa es por la medicin de los diversos as- pectos de estas capacidades. Su concepto de inteligen- cia es el de una entidad global que podra tambin ser caracterizada por la suma de muchas aptitudes espec- fcas. Contini, N. (2000). Segn Cohen, R. y Swerdlik, M. (2001) lo signifcativo de las teoras de Wechsler y Piaget es que ambos enfa- tizan el interaccionismo. Este trmino se refere al con- cepto complejo por el que se supone que la herencia y el ambiente interactan para infuir en el desarrollo de la inteligencia individual. Abordando la naturaleza de la in- teligencia desde una perspectiva que se enfoca princi- palmente en las capacidades mltiples del sujeto. Wechsler, D. (1975) agrega que hay factores que no son intelectuales que deben tomarse en cuenta cuando se evala la inteligencia. Incluidos entre ellos se encuen- tran capacidades que son de naturaleza ms innata, afectivas o rasgos de personalidad los cuales incluyen elementos como la pulsin, la persistencia y la concien- cia de la meta al igual que el potencial de un individuo para percibir y responder ante ciertos valores sociales, morales y estticos. ESTRATEGIA METODOLGICA Metodologa empleada Siguiendo lo propuesto por Vasilachis de Gialdino (2006) en funcin de la problemtica defnida como ob- jeto de indagacin, para la realizacin de este proyecto se adopt una metodologa cuantitativa. Para obtener los datos se emple la Escala de Inteligencia para nios WISC-III y el anlisis de documentacin se obtuvo me- diante el boletn de califcaciones. Seleccin de la muestra El presente trabajo se realiz con una poblacin de 17 nios seleccionado de modo no probabilstico mediante un muestreo por conveniencia, ya que se obtuvo un ac- ceso dctil a los individuos Salkind (1998, 213). Tcnicas de recoleccin de datos 1) Test WISC III de D. Wechsler 17 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA Es un instrumento clnico de administracin individual para evaluar la capacidad intelectual de nios de 6 a 16 aos y 11 meses de edad. Como todas las escalas de inteligencia de Wechsler; el WISC-III consta de varios subtest, cada uno de los cuales mide una faceta dife- rente de la inteligencia. Adems, el WISC-III aparte de dar a conocer tres CI (Cociente Intelectual de Escala Completa, Cociente In- telectual Verbal y Cociente Intelectual de Ejecucin) proporciona cuatro puntajes ndices basados en facto- res opcionales que permite indagar con mayor profundi- dad los aspectos concretos de la cognicin del nio a travs de diversas combinaciones entre los sub-test: n- dice de comprensin Verbal (ICV); ndice Organizacin Perceptual (IOP), ndice Ausencia de Distractibilidad (IAD) e ndice Velocidad de Procesamiento (IVP). Los puntajes obtenidos en este estudio fueron compa- rados y evaluados de acuerdo al baremo correspon- diente a la prov. de Tucumn realizado por Contini, N. (1995/1999) debido a la similitud existente entre las ca- ractersticas socio-econmicas, culturales, polticas, geogrfcas, etc. con la prov. de Jujuy. 2. Anlisis de documentacin: (libreta de califcacio- nes escolares) La interaccin entre la recoleccin y el anlisis permite mayor fexibilidad en la interpretacin de los datos y adaptabilidad cuando elaboramos las conclusiones Co- leman y Unrau (2005). Debe insistirse: el anlisis de los datos no es predeterminado, sino que es prefgurado, coreografado o esbozado. Es decir, se comienza a efectuar bajo un plan general, pero su desarrollo va su- friendo modifcaciones de acuerdo con los resultados, Dey (1993). PRINCIPALES RESULTADOS COCIENTE DE INTELIGENCIA DE ESCALA COM- PLETA (CIEC) Y SU RELACIN CON EL RENDIMIEN- TO EN MATEMTICAS DEL PERIODO 2008. En este punto se analizo los diferentes puntajes del CIEC en funcin de los bimestres y promedio general de Matemticas de los nios de seis a ocho aos que participaron en la investigacin. Cabe sealar que las dems variables como ser los diversos CI e ndices o datos recabados mediante las pruebas operatorias y el cuestionario no resultaron signifcativas o presentaron relacin con los rendimientos en Matemticas por eso no se presentan en el presente documento. Lo que se quiere comprobar es si las capacidades cog- nitivas evaluadas por la Escala de Inteligencia para ni- os WISC-III, y las puntuaciones logradas por los nios de la muestra (CIEC, CIE, CIV, ICV, IOP, IAD, IVP) se relacionan o no con el rendimiento en Matemticas. As tambin, se considera que se quiere estar seguro de las afrmaciones en el 95% de los casos. A partir de los datos obtenidos, se analizarn las interacciones en- tre las variables. COCIENTE INTELECTUAL DE ESCALA COMPLETA PRIMER BIMESTRE-CIEC Se calculo el coefciente de correlacin mediante el cual permite detectar si entre la nota del primer bimestre de Matemticas y el CIEC se presenta o no correlacin li- neal. El resultado indico que entre los niveles del Co- ciente Intelectual de Escala Completa no se presenta relacin con las notas de los nios en el primer bimes- tre en Matemticas del periodo 2008. (r=0.467, p=0.059). Acto seguido se calculo un ANOVA UNIFAC- TORIAL en el cual la variable dependiente es la nota del primer bimestre de Matemticas y la variable indepen- diente, es el Cociente Intelectual de Escala Completa, el cual tiene los siguientes niveles: a1 promedio, a2 me- dia alta, a3 superior y a4 muy superior. El ANOVA realizado para comprobar si existan diferen- cias en el rendimiento del primer bimestre en Matemti- cas en funcin del CIEC obtenidos mostro que no se ob- servan diferencias signifcativas [F (3, 13, 0.05) = 3.067; p = 0.065]. Es decir, el obtener un determinado puntaje en el WISC-III no es condicionante que los nios alcan- cen una determinada nota en Matemticas. Esto se puede afrmar con una probabilidad de acertar en el 1- = 95% de los casos y de error b= 16,3%. SEGUNDO BIMESTRE-CIEC Se calculo el coefciente de correlacin el cual indica si entre el nivel de Cociente Intelectual de Escala Com- pleta y la nota del segundo bimestre existe o no rela- cin lineal. El coefciente de correlacin estableci que si se pre- senta relacin entre los puntajes obtenidos en la Co- ciente Intelectual de Escala Completa y la nota de los nios en el segundo bimestre en Matemticas del perio- do 2008 (r=0.553 p=0.021), es decir, que al aumentar los niveles de CIEC puede aumentar el rendimiento de Matemticas en este bimestre, o al disminuir las puntua- ciones del CIEC disminuya el rendimiento en dicha asig- natura escolar. Este resultado determino que si existe correlacin lineal entre las notas en Matemticas del 2do bimestre y las puntuaciones logradas en el CIEC. Se calculo un ANOVA UNIFACTORIAL, para poder de- terminar si la nota del segundo bimestre est afectada o determinada por el CIEC en el cual, la variable de- pendiente es la nota del segundo bimestre de Matem- ticas y la variable independiente es el Cociente Inte- lectual de Escala Completa, la misma, tiene los si- guientes niveles: a1 promedio, a2 media alta, a3 supe- rior y a4 muy superior. El ANOVA realizado para comprobar si existan diferen- cias en el rendimiento del segundo bimestre en Mate- mticas en funcin del CIEC obtenidos mostro que si se observaban diferencias signifcativas [F (3, 13, 0.05) = 4.843; p = 0.018] al obtener un determinado puntuacin en esta escala. Para poder analizar entre qu grupos de CIEC haba diferencias respecto a la nota en Matemti- cas, se realiz una prueba post-hoc Tukey el cual refe- j que existen diferencias entre los grupos de nios cu- ya puntuaciones se encuentran comprendidas en la es- cala promedio y escala superior /muy superior ( p < 0.05) (sig. 0.009). Cabe mencionar la aclaracin que pa- ra realizar la prueba post-hoc Tukey se incluyo en el grupo de la escala superior al individuo que obtuvo una 18 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA puntuacin muy superior, debido a que esta prueba iba a no iba a resultar posible realizarla debido a que en el grupo muy superior se contaba con un solo nio de la muestra y como mnimo para poder realizar la prueba post-hoc Tukey se necesita dos individuos. Al observar las medias se puede decir que los nios de escala superior / muy superior obtuvieron mejores cali- fcaciones en el segundo bimestre con un promedio de (9) y los nios de la escala promedio obtuvieron un pro- medio de (6), es decir, que el grupo de escala superior / muy superior tienen mayor rendimiento en el segundo bimestre de Matemticas que los nios que obtuvieron una puntuacin que los ubico en el grupo de los prome- dio. Esto se puede asegurar con una probabilidad de acierto1-b=79.3% y de error en el 5 % de los casos (=0.05). TERCER BIMESTRE-CIEC Se calculo el coefciente de correlacin, el cual indico que si existe correlacin entre el nivel de CIEC y la nota del tercer bimestre en Matemticas. El coefciente indico que si se presenta relacin lineal entre las puntuaciones del Cociente Intelectual de Es- cala Completa y la nota de los nios en el tercer bimes- tre en Matemticas del periodo 2008 (r=0.60 p=0.011), es decir, que al aumentar los puntajes de Cociente Inte- lectual de Escala Completa aumenta el rendimiento en Matemticas, o al disminuir los puntajes de CIEC, dismi- nuye el rendimiento en dicha asignatura. Este resultado determino que si existe correlacin lineal entre las no- tas en Matemticas del 3er bimestre y las puntuacio- nes logradas en el CIEC. Para ello se calculo un ANOVA UNIFACTORIAL, para analizar si la nota del tercer bimestre est determinada por el CIEC en el cual, la variable dependiente es la no- ta del 3er bimestre de Matemticas y la variable inde- pendiente es el Cociente Intelectual de Escala Comple- ta, el cual tiene los siguientes niveles: a1 promedio, a2 media alta, a3 superior y a4 muy superior. El ANOVA realizado para comprobar si existan diferen- cias en el rendimiento del tercer bimestre de Matemti- cas en funcin del CIEC obtenido mostro que si se ob- servaban diferencias signifcativas [F (3,13, 0.05) = 2.741; p = 0.032] entre las califcaciones de los nios en Matemticas en relacin al CIEC. Para poder analizar entre qu grupos de CIEC se encuentran las diferencias con respecto a las notas en Matemticas del tercer bi- mestre, se realiz una prueba post-hoc Tukey el cual re- fej que existen diferencias entre los grupos de los ni- os que en el CIEC obtuvieron una puntuacin prome- dio y superior/muy superior (p < 0.05) (sig. 0.031). Para efectuar la prueba post-hoc Tukey se incluyo en el gru- po de la escala superior al nico individuo que obtuvo una puntuacin dentro del muy superior, debido a que esta prueba iba a resultar irrealizable llevarla a cabo porque en el nivel muy superior se contaba con un solo individuo. El resultado fnal de la prueba post-hoc Tukey determi- no los nios que se ubican dentro de la escala superior/ muy superior obtuvieron mejores califcaciones en Ma- temticas en el tercer bimestre con un promedio de (8.75) con respecto a los nios que obtuvieron una pun- tuacin promedio cuyas notas fueron de (5.88). Esto se puede asegurar con una probabilidad de acierto es 1- b=79.5% y de error en el 5 % de los casos (=0.05). CUARTO BIMESTRE-CIEC Adems se calculo el coefciente de correlacin, el cual indica si entre el Cociente Intelectual de Escala Com- pleta y la nota en el 4to bimestre en Matemticas exis- te relacin o no. El coefciente indico que si se presenta relacin entre los niveles de la Escala Completa (CIEC) y la nota de los nios que obtuvieron en el 4to bimestre en Mate- mticas del periodo 2008 (r=0.590 p=0.013), es decir; que al aumentar los niveles CIEC aumenta el rendi- miento de Matemticas o al disminuir las puntuaciones del CIEC disminuye el rendimiento en esta asignatura. Este resultado determino que si existe correlacin lineal entre las notas en Matemticas del 4to bimestre y las puntuaciones logradas en el CIEC. Para ello adems se calculo un ANOVA UNIFACTO- RIAL, en el cual, la variable dependiente es la nota del 4to bimestre de Matemticas y la variable independien- te es el Cociente Intelectual de Escala Completa, el cual tiene los siguientes niveles: a1 promedio, a2 media alta, a3 superior y a4 muy superior. El ANOVA realizado para comprobar si existan diferen- cias en el rendimiento del cuarto bimestre de Matemti- cas en funcin del CIEC obtenido mostro que si se ob- servaban diferencias signifcativas [F (3,13, 0.05) = 4.2791; p = 0.026] entre las califcaciones de los nios en Matemticas en relacin al CIEC. Para poder anali- zar entre qu grupos de CIEC haba diferencias con respecto a las notas en Matemticas del cuarto bimes- tre, se realiz una prueba post-hoc Tukey el cual refej que existen diferencias entre los grupos de los nios que obtuvieron una puntuacin comprendida entre pro- medio y superior/muy superior (p < 0.05) (sig. 0.007). Al realizar la prueba post-hoc Tukey se incluyo en el grupo de la escala superior al nico sujeto que obtuvo una puntuacin dentro de la escala muy superior, debido a que esta prueba iba a resultar inadecuado realizarla porque se necesita como mnimo en cada grupo dos personas. El resultado fnal de la prueba post-hoc Tukey determi- no que los nios que se ubicaron en la escala superior/ muy superior obtuvieron mejores califcaciones en Ma- temticas en el tercer bimestre con un promedio de (9.25) con respecto a los nios que obtuvieron una pun- tuacin promedio cuyas notas fueron de (5.77). Esto se puede asegurar con una probabilidad de acierto 1-b = 77.5% y de error en el 5 % de los casos (=0.05). PROMEDIO-CIEC Se quiere observar si hay o no relacin entre el CIEC y la nota promedio en Matemticas para ello se calculo el coefciente de correlacin, el cual indica si entre el Co- ciente Intelectual de Escala Completa y la nota prome- dio existe relacin o no. El coefciente indico que si se presenta relacin entre 19 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA los diversos niveles de la Escala Completa (CIEC) y la nota promedio de los nios en Matemticas del periodo 2008 (r=0,624 p=0.007), es decir, que al aumentar los puntajes de la Escala Completa aumenta el rendimien- to promedio de Matemticas o al disminuir las puntua- ciones en el CIEC, disminuye el rendimiento en dicha asignatura. Este resultado determino que si existe co- rrelacin lineal entre las notas promedios en Matemti- cas y las puntuaciones logradas en el CIEC. Adems se calculo un ANOVA UNIFACTORIAL, para indicar con precisin lo dicho por la correlacin, es decir si est de- terminada por el CIEC el promedio en Matemticas, en la cual, la variable dependiente es el promedio anual de Matemticas y la variable independiente es el Cociente Intelectual de Escala Completa que posee los siguien- tes niveles: a1 promedio, a2 media alta, a3 superior y a4 muy superior. El anova realizado para comprobar si existan diferen- cias en el promedio de Matemticas en funcin del CIEC obtenido mostro que si se observaban diferencias signifcativas [F (3, 13, 0.05) = 5.511; p = 0.012] entre las califcaciones de los nios en Matemticas en relacin al CIEC. Para poder analizar entre qu grupos de CIEC haba diferencias respecto al promedio en Matemticas, se realiz una prueba post-hoc Tukey el cual refej que existen diferencias entre los nios que obtuvieron un puntaje promedio y superior/muy superior (p < 0.05) (sig. 0.005). En la prueba post-hoc Tukey se incluyo en el grupo de la escala superior al individuo que obtuvo una puntuacin dentro de la escala muy superior. El resultado de la prueba post-hoc Tukey determino que los nios que se ubicaron en la escala superior/muy su- perior obtuvieron mejores califcaciones en Matemti- cas en el tercer bimestre con un promedio de (9) con respecto a los nios que obtuvieron una puntuacin pro- medio cuyas notas fueron de (5.88). Esto se puede ase- gurar con una probabilidad de acierto 1-b = 79% y de error en el 5 % de los casos (=0.05). CONCLUSIN De acuerdo a los resultados obtenidos en la Escala de Evaluacin de la Inteligencia para nios WISC-III, pue- de expresarse que la totalidad de la muestra presenta puntuaciones Promedio y/o Promedio alto en el Cocien- te Intelectual de Escala Completa (CIEC) en compara- cin con la baremacion realizada en la Prov. de Tucu- mn. Sin embargo, dicha homogeneidad no se registr en los Cocientes tanto de Ejecucin (CIE) como el Ver- bal (CIV) y en los diversos ndices, de Organizacin Perceptual (IOP), Comprensin Verbal (ICV), Velocidad de Procesamiento (IVP) y en el ndice de Ausencia de Distractibilidad (IAD). En relacin al objetivo, se detecto que existe una corre- lacin lineal entre el rendimiento escolar en Matemti- cas y el Cociente Intelectual de Escala Completa (CIEC) del Test WISC-III en los diversos bimestres (segundo, tercero, cuarto y promedio fnal) con excepcin del pri- mer bimestre. Este vnculo entre las puntuaciones de la Escala Completa y las califcaciones, permite demos- trar que los sujetos que obtienen puntuaciones altas en el test poseen mejor rendimiento escolar en Matemti- cas, en tanto los nios que alcanzaron puntaje bajo en la Escala tuvieron una baja califcacin en Matemticas. Se puede decir en general, que los individuos analiza- dos desarrollaron las capacidades cognitivas necesa- rias para su edad. Entre los puntajes obtenidos a partir de la aplicacin de la Escala tanto de Ejecucin como Verbal no se obser- v tal correlacin con las califcaciones obtenida por los nios en la asignatura de Matemticas. Del mismo modo tampoco se observ una relacin lineal entre las notas logradas por los nios y los diversos ndices (ICV, IOP, IVP e IAD). En cuanto al C.I de Ejecucin, como al Verbal los nios se encuentran dentro de un nivel ade- cuado en estas competencias, un porcentaje por enci- ma de los niveles promedios requeridos para su edad. Es de destacar que en cada una de las pruebas de manera independiente, en la generalidad de los subtests, el mayor porcentaje de los alumnos se ubica en niveles bajos de produccin (ndice Au- sencia de Distractibilidad, IAD). Sin embargo, los mismo nios, en el ndice de Velocidad de Procesa- miento (IVP) obtienen puntuaciones suficientemen- te altas que compensan el dficit en los restantes ndices. Esta compensacin, permite que en los resultados fna- les de escala completa, los alumnos obtengan un pun- taje promedio. Los resultados sistematizados muestran que en su gran mayora los nios presentan difcultades en las compe- tencias cognitivas vinculadas a la atencin, concentra- cin, capacidad de establecer secuencias, memoria de corto plazo, memoria auditiva, competencias numricas o cuantitativas, integracin de materiales y deteccin de aspectos claves de los mismos. No obstante, los nios evaluados de manera global se encuentran dentro del rango normal. Las Matemticas para su comprensin y prctica re- quieren capacidades adems de la atencin y concen- tracin, de pensamientos evaluados por las pruebas que integran los ndices tanto de Organizacin Percep- tual, Ausencia de Distractibilidad y Velocidad de Proce- samiento. Los nios obtuvieron un desempeo escolar en el rea matemtica, acorde a lo esperado, a pesar de poseer puntuaciones bajas en los ndices Ausencia de Distractibilidad e ndice de Organizacin Perceptual. Esto result llamativo porque estos ndices en particular evalan aquellos aspectos referidos al desempeo en Matemticas. Los logros signifcativos obtenidos por los nios en las pruebas del WISC-III, que atienden a la memorizacin, permitira suponer, al menos en la presente produccin, que para el xito en la escuela primaria resulta ms rele- vante la capacidad memorstica que el razonamiento l- gico. Son varios los grupos de investigadores que siguen esta lnea de indagacin, en busca de una posible expli- cacin al rendimiento en Matemticas y su vinculacin con el capital cultural y las capacidades cognitivas. Estos 20 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA autores trabajaron temticas vinculadas a las estrategias cognitivas y a la conformacin de subjetividades desa- rrolladas a partir de un entorno social que posibilitara el estimulo de procesos internos manifestos como habili- dades para adaptarse a situaciones nuevas. Sus trabajos hacen referencia a distintas tradiciones for- mativas en las prcticas de la enseanza, en las cuales predominaran enfoques tradicionales sostenidos en la trasmisin de los contenidos, la exigencia de repeticin, a veces memorsticas, no comprensiva y la presencia de un imaginario por parte de las maestras respecto a que los nios deberan poseer un conjunto de conocimientos previos adquiridos en los niveles pree escolares. El he- cho de poder indicar que respecto a los estudios que analizan el papel de la memoria, la atencin y la concen- tracin en el clculo, quedar determinado de una forma defnitiva el papel desempeado por cada uno de los subsistemas del razonamiento en la adquisicin y ejecu- cin del clculo. A modo de refexin fnal se sostiene que conocer este tipo de instituciones no implica descu- brir sus carencias para dejarlas morir, por el contrario sig- nifca dar una invitacin a colaborar con ellas en las te- mticas que se enfocan su trabajo diario. BIBLIOGRAFA Ander-Egg, E. (1995): Tcnicas de investigacin social. Editorial Lumen. Bs. As. Argentina. Bravin, C. (2004): Escuelas, familias y mujeres. Ediciones Nove- dades Educativas. Bs. As. Argentina. Castorina, J.A. y otros (1989): Problemas en psicologa gentica. Mio y Dvila Editores. Bs. As. Argentina. Cayssials, A. N. (1998): La escala de Inteligencia WISC-III en la evaluacin psicolgica Infanto-juvenil. Paids. Bs. As. Argentina. Cea D`Ancona, J. 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Argentina. Wechsler, D. (1994): Test de Inteligencia para nios WISC-III, Manual. Paids. Bs. As. Argentina. 21 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA LA VARIABLE SOCIOECONMICA Y SU RELACIN CON EL RECONOCIMIENTO PRECISO Y RPIDO DE LA PALABRA ESCRITA Cuadro, Ariel; Balbi, Alejandra Universidad Catlica del Uruguay Introduccin La lectura es un medio de gran importancia para alcan- zar nuevos conocimientos y ampliar nuestra visin del mundo; lo que nos permite experimentar nuevas reali- dades y sensaciones. Resulta imprescindible para res- ponder a las necesidades de formacin e informacin que exige el mundo de hoy y es un medio privilegiado e insustituible de aprendizaje y comunicacin humana. Comparando las competencias en lectura de Uruguay en relacin con otros pases se ha observado que nues- tro estudiante promedio se encuentra en un nivel de desempeo muy bajo, indicando problemas graves en el logro de la alfabetizacin lectora requerida para par- ticipar activamente en la sociedad del conocimiento. Segn datos de PISA (2003, 2006, 2009) la proporcin de alumnos con mal desempao ha aumentado de for- ma sostenida desde el 2003 a 2009. En el 2009 el 42% de estudiantes de 15 aos en Uruguay no supera el umbral de competencia en el rea de lectura, mientras que el promedio de alumnos que no sobrepasa este umbral mnimo es de 20% en los 33 pases de la OCDE. (PISA, 2009) Cuando se analizan estos resultados atendiendo a las caractersticas sociales, econmicas y culturales que predominan en las escuelas evaluadas, se encuentra que el 68,4% los alumnos de contexto muy desfavora- ble estn por debajo del umbral de competencia en cuanto a lectura, y en el nivel sociocultural muy favora- ble, slo el 7,7% se encuentra en esa posicin. A su vez slo el 1,4% de los alumnos de nivel sociocultural muy desfavorable tienen desempeos altos en lectura mien- tras que en los contextos muy favorables son el 39% (PISA, 2009). Estos resultados constituyen un problema grave de la educacin, especialmente en los sectores econmica- mente dbiles. Para poder dar respuesta alguna esta problemtica es relevante considerar lo que se sabe en la actualidad sobre la lectura y su aprendizaje; con el fn de entender que est ocurriendo a nivel las variables implicadas en el acto de leer. Una mayor comprensin de estas facilitar sin duda la refexin sobre cmo abordar su enseanza, atendiendo los diferentes con- textos socioeconmicos a los que pertenecen nuestros nios. Las pruebas PISA evalan las competencias ligadas a la comprensin de la lectura y no a la lectura en el sen- tido ms restringido, es decir no recogen informacin sobre la precisin con que los alumnos identifcan la pa- RESUMEN En el siguiente estudio se analizan las relaciones entre la efcacia en el reconocimiento de la palabra escrita, medida en funcin de la precisin y velocidad, y diferen- tes niveles socio-econmicos; con el objetivo de contri- buir a la refexin sobre los resultados en lectura obteni- dos por los alumnos de nuestro pas en las pruebas PI- SA. Utilizando un test de efcacia lectora (Cuadro y col. 2009) que incluye la precisin y rapidez en el reconoci- miento de la palabra escrita, se evaluaron 432 alumnos de tres escuelas urbanas y privadas de Montevideo de diferentes niveles socio-econmicos. Los resultados muestran una relacin signifcativa entre el reconoci- miento de las palabras escritas en forma precisa y rpi- da y el nivel socioeconmico; los que es interpretado en marco de la importancia del dominio de los procesos fo- nolgicos y ortogrfcos en el aprendizaje de la lectura. Palabras clave Lectura Decodifcacin Aprendizaje ABSTRACT SOCIOECONOMIC STATUS AND ITS RELATION WITH ACCURATE AND FAST WRITTEN WORD RECOGNITION In the following study we analyze the relationship be- tween effectiveness in written word recognition - based on its accuracy and speed - and different socio-eco- nomic levels. Hereby, we aim to nourish a critical refec- tion on the reading scores obtained by our countrys pu- pils in PISA assessments. Using a Reading Effective- ness test (Cuadro y col. 2009) which includes the accu- racy and speed of written word recognition, we evaluat- ed 432 pupils of three urban private elementary schools in Montevideo of different socio-economic level. The re- sults show a signifcant relationship between correct and fast written word recognition and socio-economic level, which is understood within the importance of the mastery of phonological and orthographical processes for reading acquisition. Key words Reading Decodifcation Learning 22 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA labra escrita, ni el grado de fuidez que logran. La preci- sin y la velocidad con las que se identifcan las pala- bras, que se relaciona con la automatizacin del acce- so lector (Perfetti, 1992; Cuadro, 2010), favorece, en la medida que libera recursos cognitivos, la efcacia de los procesos cognitivo superiores implicados en la com- prensin (Lesgold y col. 1985; Perfetti, 1986). La lectura fuida de los lectores expertos supone exacti- tud y rapidez en el reconocimiento de las palabras y en el caso del espaol, como de otras lenguas transparen- tes, diferencian signifcativamente a los lectores retra- sados de los normales (Shany y Share, 2010). Las lenguas se diferencia entre ellas por la mayor o me- nor trasparencia de la relacin entre su forma oral y es- crita; as el espaol a diferencia del ingls la relacin grafema-fonema y fonema-grafema es relativamente simple y consistente. Esta caracterstica del espaol co- mo de otras lenguas (alemn, hebreo, etc) facilita la uti- lizacin del mecanismo de trasformacin grafema-fone- ma para el reconocimiento de palabras (Carrillo y Ale- gra, 2009). Mecanismos que se automatizan en los buenos lectores, accediendo sin difcultad a la palabra escrita. El acceso a la palabra escrita, en forma automtica, re- quiere el dominio y automatizacin de la reglas de con- versin grafema-fonema; mecanismo por el cuales se atribuyen secuencias fonolgicas a secuencias ortogr- fcas que se ensamblan en una palabra (ensamblaje fo- nolgico). En el aprendizaje de la lectura este ltimo mecanismo va permitiendo desarrollar progresivamente un lxico ortogrfco que almacena representaciones de palabras escritas, las que luego podrn ser identif- cadas en forma directa y a un bajo costo cognitivo (Cua- dro, 2010). Precisamente el modelo de autoaprendizaje de Share (1995, 1999) ha defendido la idea de que de- codifcacin permite la adquisicin de las representa- ciones ortogrfcas necesarias para un reconocimiento visual de la palabra rpido y autnomo. El reconocimiento de la palabra escrita, en forma preci- sa y rpida, mejora a lo largo de los distintos cursos es- colares (Stanovich, 1993) y tiene un efecto constante sobre la comprensin lectora, de tal forma que la inef- cacia el reconocimiento de palabras llevara a una com- prensin lectora con difcultades (Perfetti, 1985). Si bien hay sufciente evidencia cientfca para indicar que la identifcacin de palabra parece no explicar to- dos los problemas en comprensin lectora (Perfetti, 2005; Aarnoutse, 2001), hay acuerdos en que las habi- lidades relacionadas con la decodifcacin predicen fuertemente el nivel lector durante los primeros aos escolares (Storch y Whitehurst, 2002) y juega un rol fun- damental durante el proceso de aprendizaje de la lectu- ra. No es frecuente encontrar sujetos que lean bien las palabras y no sepan comprender lo que leen a excep- cin de que exista falta de vocabulario o difcultades de comprensin de lenguaje en general (Perfetti, 1986; Nation, 2004). Incluso en los adultos la habilidad en el reconocimiento de palabras incide en la capacidad lec- tora (Stanovich, 1989). El estudio sobre la efcacia en el reconocimiento de las palabras constituye , y as debera considerarlo la ense- anza, unos de los objetivos principales para entender la lectura, su adquisicin y las difcultades que experi- mentan muchos de nuestros estudiantes al querer o te- ner que leer. Las pruebas PISA miden la comprensin lectora de es- tudiantes que han cumplido 15 aos; resulta inevitable preguntarnos al momento de analizar los resultados vinculados a las diferencias socioeconmicas de los es- tudiantes participantes, si mecanismos especfcos del aprendizaje de la lectura desde las etapas iniciales has- ta su consolidacin a fnal de la primaria se ven afecta- do tambin por esas diferencias. Por ello en el presente estudio nos proponemos evaluar el nivel lector, considerando las variables precisin y ve- locidad, de estudiantes de cuarto a sexto de primaria, de niveles socioeconmicos alto, medio y bajo. No se consideraron alumnos de contexto muy desfavorable o crtico. MTODO Participantes Se selecciona una muestra intencional compuesta por 432 alumnos de tres escuelas urbanas y privadas de Montevideo. Corresponden a tres estratos clasifcados como Alto, Medio y Bajo segn el ndice de satisfaccin de Necesidades Bsicas (INE, 2000). La muestra total se distribuye en 152 alumnos de Cuarto grado, 143 de Quinto y 137 de Sexto grado escolar. Instrumentos Utilizamos el Test de Efcacia Lectora (TECLE) (Cuadro y col. 2009) ya que permite incluir en la medicin de la efcacia lectora los principales parmetros que la con- trolan: precisin y velocidad. Esta prueba consiste en un listado de 64 frases incompletas que el evaluado de- be completar eligiendo una de las 4 palabras que se le dan como opcin de respuesta. Las tres opciones fal- sas son dos pseudopalabras que constituyen pares m- nimos ortogrfco y fonolgico de la respuesta correcta, y por ltimo, una palabra que resulta inadecuada desde el punto de vista semntico y/o sintctico para comple- tar la frase. Por tanto, el evaluado necesita ser capaz de discriminar entre sutiles cambios fonolgicos, ortogrf- cos y semntico/sintcticos para poder contestar ade- cuadamente. La prueba est cronometrada, por lo que la seleccin de alternativas debe producirse con el me- nor consumo de tiempo disponible. . Procedimientos Una vez seleccionados los colegios, se consigui el consentimiento vlido y se acord con las autoridades de la institucin la forma y lugares para la aplicacin de las pruebas, se evaluaron en forma colectiva a todos los sujetos seleccionados. Las evaluaciones estuvieron a cargo de un equipo tcnico entrenado por los autores. 23 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA RESULTADOS En la Tabla 1 se presentan los resultados obtenidos en Efcacia Lectora (precisin y velocidad). Tabla 1. Estadsticos Descriptivos de la variable efca- cia lectora (precisin y velocidad) en cada grado esco- lar. Grupo N Eficacia Lectora (precisin y velocidad) Media (DE) 4 152 27.67 (9.5) 5 143 32.67 (11.21) 6 137 36.06 (10.83) Total 432 31.99 (11.05) Nota. Calidad Lxica, mximo puntaje 64 puntos. Se obtienen parmetros de distribucin normal a travs de la Prueba Z-Kolmorogov-Smith en las medidas de Efcacia Lectora, para los tres grados escolares (Z= 1,449; p= 0,229) Se realiza una comparacin de medias (prueba t de Student) de la variable Efcacia Lectora (precisin y ve- locidad) entre los cursos escolares. Se identifcan dife- rencias signifcativas entre Cuarto, Quinto y Sexto gra- do escolar en la variable Efcacia Lectora (4-5, t= 4,131, p= .001; 5-6, t= 2,573, p= .001) En la tabla 2 se presentan los descriptivos segn entor- nos socioculturales Alto, Medio y Bajo. Tabla 2. Estadsticos descriptivos de la variables Efca- cia Lectora en cada entorno sociocultural. Estrato N=432 Eficacia Lectora (precisin y velocidad) Media (DE) Alto Medio Bajo 187 116 129 35.97 (10.77) 33.18 (9.74) 25.14 (9.27) El reconocimiento preciso y fuido de la palabra escrita (Efcacia Lectora) presenta diferencias estadsticamen- te signifcativas en cada estrato (Alto-Medio, t=2,274, p= .024; Medio-Bajo, t=6,608, p= .000). DISCUSIN Y CONCLUSIONES El reconocimiento de palabras, medido en trminos de precisin y velocidad muestra una progresin curso a curso con diferencias estadsticamente signifcativas. Este dato refeja aprendizajes que se consolidan aso- ciados a las experiencias lectoras durante el transcurso escolar. La automatizacin y la velocidad lectora depen- den de la frecuentacin progresiva con experiencias lectoras. , Adems, en la medida que un estudiante lee mejor, va a estar motivado a aumentar su actividad lec- tora y con ello la prctica. Los alumnos del entorno sociocultural Bajo presentaron rendimientos con diferencias estadsticamente signif- cativa respecto a los del entorno Medio y del entorno Al- to, para los tres grados escolares. Barg (2000) compar medidas de Lectura semejantes en grupos de Tercer y Cuarto ao, en entornos Bajo y Alto, mostrando que las diferencias que estaban presentes en Tercer grado, se disipaban en Cuarto. Nuestro estudio, diez aos des- pus, muestra evidencia desalentadora, ya que las dife- rencias estn presentes desde Cuarto grado y se mantienen hasta fnalizar la escolaridad. Los alumnos del entorno Bajo leen en Sexto grado como sus pares de Cuarto grado de entornos ms favorables. Diversos estudios sealan que nios provenientes de entornos socioculturales desfavorables encuentran nu- merosas difcultades en el proceso de alfabetizacin (Bravo, 1995, Borzone & Rosemberg, 2000, Diuck, 2003; Cuadro y col., 2008, 2009). Un porcentaje signif- cativo de los nios de sectores entornos socioculturales desfavorables ingresa a la escuela con un menor desa- rrollo de ciertas habilidades cognitivas, hecho que los sita en una situacin de vulnerabilidad respecto de sus pares de otros medios. Sus difcultades por aprender a leer aparecen estrechamente relacionadas con insuf- ciencia en el desarrollo de lenguaje (Borzone, 1997; Morais, 1998; Bravo, 1995, Ehri y col., 2001; Bravo y Orellano, 2001; Cuadro y col., 2009). Estas insufcien- cias lingsticas afectan, entre otras capacidades, el de- sarrollo de las habilidades metafonolgicas (conciencia fonolgica) necesarias para un efcaz aprendizaje de las reglas de transformacin grafema-fonema (Defor, 2008) y con ello la puesta en marcha de los mecanis- mos de procesamiento fonolgico y ortogrfco que per- mitan el reconocimiento de palabras de forma precisa y rpida (Share, 1995, 1999; Perfetti, 1995). Mientras que los estudios mencionados ponen de relie- ve las debilidades lingsticas de los alumnos al iniciar la escolaridad en los sectores ms vulnerables, los re- sultados de PISA destacan sobre las insufciencias en competencias de comprensin lectora de las poblacio- nes vulnerables al fnalizar la educacin bsica. Nuestro estudio agrega que el reconocimiento de pala- bras, como proceso lingstico articulador entre lengua- je y comprensin lectora, en las etapas intermedias de la escolaridad, se muestra sensiblemente afectado. Di- fcilmente, los alumnos de sectores vulnerables puedan alcanzar competencias mnimas de comprensin lecto- ra si arrastran defciencias en el reconocimiento de pa- labras y habilidades lingsticas. Implicaciones educativas se desprenden de nuestro es- tudio al mostrar la necesidad de fortalecer y desarrollar la habilidad de reconocimiento de la palabra escrita desde un nivel inicial si queremos lectores competentes en el futuro; en particular se hace fundamental estable- cer polticas y estrategias especfcas para los alumnos que asisten a escuelas de contextos socioeconmicos menos favorables. En la escuela la accin pedaggica suele tener un menor efecto cuando se dan variables socioeconmicas desfavorables, ya que muchas veces no pude desarticular por si misma las defciencias cog- nitivas instaladas (Cuadro y col. 2008). 24 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA BIBLIOGRAFA Aarnoutse, C., Leeuwe, J. V., Voeten, M., & Oud, H. (2001). De- velopment of decoding, reading comprehension, vocabulary and spelling during the elementary school years. Reading and Writing: An Interdisciplinary Journal 14, 61-89. ANEP-PISA. (2007). Uruguay en Pisa 2006, Montevideo. ANEP/CODICEN. 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Bajo este panorama, si bien el militar debe ejercer per- manentemente su liderazgo en tareas vinculadas a la misin de defender la integridad territorial local y su so- berana, los nuevos escenarios internacionales en los que nuestro pas colabora bajo el mandato de las Na- ciones Unidas, demandan la adaptacin a contextos de alto nivel de complejidad fenomnica e incertidumbre ambiental. En el marco de estas situaciones de ambi- gedad cultural, por ejemplo, deben resolver problemas y tomar decisiones sobre eventos extraos o descono- cidos, requiriendo la aplicacin de procesos psicolgi- cos de pensamiento y accin que en ocasiones no se hallan contemplados por la doctrina vigente (Azzollini et al., 2010). Acorde a poltica bsica de las Naciones Unidas, cuyas metas son el desarrollo y el estmulo del respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales sin distincin de sexo, raza, idioma o religin (Pinto, 2006; Mancini, et al., 2010) se legitima el anlisis de variables psicolgicas como la inteligencia cultural (Thomas et al., 2008), los estilos de liderazgo (Bass, 1990) y los va- lores humanos (Schwartz, 1994; Casullo & Castro Sola- no, 2004; Castro Solano, 2005; Depaula, 2008) subya- centes a los procesos de toma de decisiones en contex- tos multiculturales diversos. Por tal motivo, las decisio- nes tomadas en el marco de relaciones interculturales, deben ser ajenas a prejuicios o acciones discriminato- rias, siendo indispensable que los peacekeepers mani- festen cierta apertura al conocimiento de lo novedoso para comprender y adaptarse a las diferencias cultura- les (Berry, 1974; 1999). En relacin al estudio de las capacidades o competen- cias militares, Bartone (1999) argumenta que los futu- ros ofciales militares deben ser altamente resilientes, ingeniosos, y rpidos para ajustarse a situaciones que cambian rpidamente (p. 1), reconsiderando por ejem- plo, el papel de los rasgos de la personalidad normal que infuiran sobre su performance, contraponindose a las primeras investigaciones limitadas al estudio de RESUMEN En la actualidad, los nuevos escenarios internacionales donde operan los militares argentinos, requieren la to- ma de decisiones en contextos multiculturales de gran incertidumbre ambiental, provocando frecuentemente extraeza en los juicios de atribucin de signifcados (Azzollini et al., 2010). Se desarroll un estudio descrip- tivo a fn de analizar diferencias en los niveles de inteli- gencia cultural, en los estilos de liderazgo y en los valo- res humanos, de acuerdo al estilo de toma de decisio- nes predominante, pudiendo ser ste analtico o intuiti- vo. Para ello, se seleccion una muestra no probabils- tica intencional de la que participaron 59 sujetos volun- tarios de una misin de paz, a los que se les administr una batera de tests psicomtricos estandarizados. Los datos fueron analizados estadsticamente mediante el software SPSS 11.0. Los resultados indican que valores de apertura al cambio como el Hedonismo, diferen- cian a sujetos cuyas decisiones son predominantemen- te intuitivas, lo cual se vincula a la valoracin de la inde- pendencia en acciones, pensamientos, sentimientos y nuevas experiencias, destacndose la bsqueda de la gratifcacin personal. Palabras clave Decisiones Incertidumbre Valores Apertura ABSTRACT DECISION MAKING PROCESSES IN MULTICULTURAL CONTEXTS: THE IMPORTANCE OF HUMAN VALUES The new international environmental -where argentine military operate- requires decision making processes in multicultural contexts of great uncertainty. These proc- esses frequently generate surprise on meaning attribu- tion judgments (Azzollini et al., 2010). A descriptive study was developed with the aim to analyze differenc- es between diverse levels of cultural intelligence, styles of leadership and human values, according to the pre- dominant style of decision making: analytic or intuitive. An intentional sample of 59 voluntary for a peace mis- sion was selected. We administered them a battery of standardized psychometric tests. Data were analyzed statistically with SPSS 11.0 software. Results show that people with an style predominantly intuitive sustain the values openness to change and Hedonism, which ties to the evaluation of independence in actions, thoughts, feelings and new experiences, standing out the search of personal allowance. Key words Decision Uncertainly Values Openness 26 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA rasgos patolgicos. En efecto, una investigacin reali- zada por Bartone (1999) concluye que variables cogniti- vas, emocionales y de la personalidad constituyen un modelo integralmente infuyente sobre el desarrollo y la efcacia del lder. Un reciente estudio vinculado al anlisis de predictores del rendimiento general de estudiantes militares (De- paula, 2010; 2011), establece que factores tales como una personalidad responsable, escrupulosa, con fuerte voluntad y determinacin, junto con altos niveles de in- teligencia cultural refexiva-motivacional y cognitiva, predicen positivamente la performance de los cadetes; al tiempo que una personalidad egocntrica en el deve- nir de las relaciones interpersonales, insensible y com- petitiva (manifestando un exacerbado nivel de afabili- dad), asociada a metas de aprendizaje aversivas sobre el objeto de estudio acadmico y a un estilo de lideraz- go laissez faire (es decir, la inefcacia en el ejercicio del liderazgo), resultan predictores negativos del rendi- miento general de los estudiantes militares. Especifcando los procesos decisorios que emergen en escenarios en los que interactan patrones culturales diversos, resulta relevante la consideracin de Rojot (2008), quien apelando a los postulados de Simon (1955) acerca de la racionalidad humana <<limitada y aproximada>>, considera los aspectos contextuales y las culturas como limitaciones que operan sobre la ra- cionalidad. Dichas limitaciones se observan a travs de varios factores: el cambio cultural, la forma en que se produce la conexin entre cultura nacional, ocupacional y corporativa y los efectos de la diversidad cultural so- bre la toma de decisiones. Con todo, resulta de gran re- levancia investigar los estilos predominantes de toma de decisiones de los peacekeepers, en trminos de pro- cesos lgicos o no-lgicos (Simon, 1947; 1987), donde la intuicin es conceptualizada como un anlisis crista- lizado en hbito y en capacidad para responder rpida- mente por medio del reconocimiento (lo que facilitara la toma de decisiones en contextos complejos e inciertos), o es descripta como un sistema de procesamiento de la informacin de naturaleza <<experiencial>> (intuitivo) que opera en paralelo a un sistema <<cognitivo>> (ra- cional-analtico) (Epstein, 1994). II. OBJETIVO Analizar si existen diferencias en las dimensiones de la inteligencia cultural (refexiva-motivacional, cognitiva y conductual-lingstica), los estilos de liderazgo (trans- formacional, transaccional y laissez faire) y las dimen- siones correspondientes a los valores humanos (auto- promocin, apertura al cambio, trascendencia y conser- vacin) conforme a los estilos decisorios predominan- tes (analtico o intuitivo). III. METODOLOGA Tipo de estudio: cuantitativo, descriptivo. Sujetos y muestra: Se seleccion una muestra no pro- babilstica intencional de la que participaron 59 sujetos voluntarios en una misin de paz en Hait. El 76.3% (n = 45; N = 59) de los sujetos eran de sexo masculino y el 23.7% (n = 14; N = 59) de sexo femenino. La edad pro- medio era de 30.69 aos (SD = 6.11 aos). Tcnicas e instrumentos: Cultural Intelligence Scale (CQS) (Ang et al., 2007; validada en Argentina por De- paula, 2010); Cuestionario de Estilos de Liderazgo (CE- LID) (Castro Solano, Nader y Casullo, 2004); Cuestiona- rio de Valores Contextualizados (VAL) (Casullo y Castro Solano, 2004); Escala de Toma de Decisiones Operati- vas (ETDO), adaptacin ad hoc realizada sobre los tems de la Encuesta de Conocimiento Tcito (Daake, Dawley & Anthony, 2004) para evaluar el estilo de toma de decisiones. Los reactivos de la totalidad de estos ins- trumentos, fueron respondidos mediante una escala formato Likert con 5 opciones de respuesta, cuyo esca- lamiento presentaba las categoras Muy de acuerdo (5 puntos), En parte en desacuerdo (4 puntos), Ni de acuer- do ni en desacuerdo (3 puntos), En parte de acuerdo (2 puntos) y Muy en desacuerdo (1 punto). Anlisis de los datos: Los datos obtenidos fueron anali- zados estadsticamente con el software SPSS 11.0, ver- sin castellana. IV. RESULTADOS Cumpliendo con el objetivo de analizar aspectos dife- renciales de la inteligencia cultural, de los estilos de li- derazgo y de los valores humanos conforme a los esti- los decisorios predominantes en la muestra estudiada, y habindose hallado en el estudio sujetos con predomi- nancia de tipo analtica (n = 46; N = 59) e intuitiva (n = 13; N = 59), se llev a cabo una prueba t de Student pa- ra muestras independientes. Los resultados encontrados evidencian que existen di- ferencias signifcativas en los valores humanos de los sujetos en funcin de sus estilos de toma de decisiones. Se observa que la dimensin valrica apertura al cam- bio alcanz un valor de signifcacin de p = .03 para un coefciente t de -2.289 (gl = 19.64), lo cual indica que la valoracin de la independencia en acciones, pensa- mientos, sentimientos y nuevas experiencias diverge en los sujetos predominando un estilo de toma de decisio- nes de tipo intuitivo (media = 3.84; n = 13), a diferencia de sujetos predominantemente racionales en sus deci- siones, los que presentan menores puntajes para la misma dimensin (media = 3.40; n = 46). Especfca- mente, el valor Hedonismo que integra dicha dimensin, presenta diferencias signifcativas (t = -2.893; gl = 21.37; p = .009), predominando en sujetos que resultan ms intuitivos en sus decisiones (media intuitivo = 4.10 vs. media analtico = 3.41), lo cual indica que tales perso- nas son ms abiertas a los cambios contextuales, aut- nomas y fexibles en sus procesos de pensamiento, priorizando experiencialmente las vivencias placente- ras y gratifcantes al momento de tomar decisiones. Asimismo, se observa cierta tendencia del valor Logro (t = 1.915; gl = 18.86; p = .071) a presentarse en sujetos analticos en mayor medida (media analtico = 4.13 vs. media intuitivo = 3.76), lo cual indicara que aquellas de- cisiones vinculadas a la bsqueda del xito personal poniendo en juego competencias socialmente acepta- bles, se manifestan en mayor medida en procesos de- cisorios racionales, planifcados a travs de conoci- mientos utilizados de manera consciente, ms que en el 27 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA despliegue automtico de procesos intuitivos. Por el contrario, tanto las dimensiones de la inteligen- cia cultural como los estilos de liderazgo, no arrojaron diferencias estadsticamente signifcativas entre las medias de sujetos con predominancia decisoria intuiti- va o analtica. V. CONCLUSIN El presente estudio ha permitido reconocer la relevan- cia que presentan los valores humanos para la toma de decisiones, sobre todo cuando los contextos de accin condicionan los procesos de pensamiento, al enfrentar situaciones experiencialmente novedosas. El hallazgo de un signifcativo nivel de apertura al cam- bio presente en sujetos que resultan altamente intuitivos en sus decisiones, resulta congruente con los aportes de Stone y Allgaier (2008), quienes destacan valores de Autodireccin y Estimulacin (ambos correspondientes a la dimensin valrica apertura al cambio), considern- dolos como factores de apoyo a la toma de decisiones bajo situaciones de riesgo e incertidumbre. No obstan- te, en el presente estudio, el valor Hedonismo (que com- pleta la trada de valores de apertura al cambio) ha pre- sentado una media signifcativamente superior en suje- tos que resultan ms intuitivos, no as los dos primeros valores, lo cual podra signifcar que esta bsqueda de placer y gratifcacin al momento de resolver la tarea, contribuira saludablemente al afrontamiento del estrs y el shock cultural que implica la toma de decisiones ba- jo incertidumbre, <<disfrutando profesionalmente>> de las decisiones tomadas. Por ltimo, Stone y Allgaier (2008) enfatizan en que la diversidad de valores culturales (p. 126) producto del transculturalismo, infuyen fuertemente en la toma de decisiones; siendo necesario desarrollar dominios es- pecfcos decisorios a travs de procesos de entrena- miento. De este modo, parece necesario, en futuras in- vestigaciones, continuar estudiando cmo infuyen di- rectamente los valores humanos y las normas cultura- les aprendidas sobre las decisiones de naturaleza o contenido transcultural. Tabla I. Diferencias de los valores humanos de acuerdo al estilo decisorio predominante. Estadsticos de grupo Estilo predominante N Media Desviacin tp. Error tp. de la media Poder Analtico 46 2,7536 ,81781 ,12058 Intuitivo 13 2,8205 ,97767 ,27116 Logro Analtico 46 4,1304 ,60646 ,08942 Intuitivo 13 3,7564 ,62589 ,17359 AUTOPROMOCIN Analtico 46 3,4420 ,56679 ,08357 Intuitivo 13 3,2885 ,68602 ,19027 Hedonismo Analtico 46 3,4130 ,82906 ,12224 Intuitivo 13 4,1026 ,73767 ,20459 Estimulacin Analtico 46 3,7790 ,70628 ,10414 Intuitivo 13 3,8974 ,64384 ,17857 Autodireccin Analtico 46 3,0036 ,84363 ,12439 Intuitivo 13 3,5128 1,16758 ,32383 APERTURA AL CAMBIO Analtico 46 3,3986 ,62011 ,09143 Intuitivo 13 3,8376 ,60793 ,16861 Universalismo Analtico 46 4,5942 ,51598 ,07608 Intuitivo 13 4,7051 ,43116 ,11958 Benevolencia Analtico 46 4,5000 ,50553 ,07454 Intuitivo 13 4,4872 ,74056 ,20540 TRASCENDENCIA Analtico 46 4,5471 ,40622 ,05989 Intuitivo 13 4,5962 ,57115 ,15841 Tradicin Analtico 46 3,9964 ,63682 ,09389 Intuitivo 13 3,5513 ,95108 ,26378 Conformidad Analtico 46 4,1522 ,68748 ,10136 Intuitivo 13 4,3974 ,73137 ,20285 Seguridad Analtico 46 4,5362 ,46337 ,06832 Intuitivo 13 4,5897 ,68250 ,18929 CONSERVACIN Analtico 46 4,2283 ,46940 ,06921 Intuitivo 13 4,1795 ,67706 ,18778 28 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA Prueba de muestras independiente
Prueba de Levene para la igualdad de varianzas Prueba T para la igualdad de medias
F
Sig.
t
gl
Sig. (bilateral) Diferencia de medias Error tp. de la diferencia 95% Intervalo de confanza para la diferencia Inferior Superior Poder Se han asumido varianzas iguales ,801 ,374 -,249 57 ,804 -,0669 ,26823 -,60402 ,47024 No se han asumido varianzas iguales -,225 17,037 ,824 -,0669 ,29676 -,69289 ,55911 Logro Se han asumido varianzas iguales ,046 ,832 1,950 57 ,056 ,3740 ,19179 -,01004 ,75808 No se han asumido varianzas iguales 1,915 18,859 ,071 ,3740 ,19527 -,03488 ,78293 AUTOPRO- MOCIN Se han asumido varianzas iguales 2,156 ,148 ,823 57 ,414 ,1536 ,18654 -,21998 ,52711 No se han asumido varianzas iguales ,739 16,909 ,470 ,1536 ,20781 -,28506 ,59219 Hedonismo Se han asumido varianzas iguales 1,094 ,300 -2,708 57 ,009 -,6895 ,25464 -1,19942 -,17962 No se han asumido varianzas iguales -2,893 21,370 ,009 -,6895 ,23833 -1,18463 -,19441 Estimulacin Se han asumido varianzas iguales ,140 ,709 -,544 57 ,589 -,1185 ,21786 -,55472 ,31782 No se han asumido varianzas iguales -,573 20,905 ,573 -,1185 ,20672 -,54846 ,31156 Autodireccin Se han asumido varianzas iguales 2,318 ,133 -1,759 57 ,084 -,5092 ,28940 -1,08871 ,07032 No se han asumido varianzas iguales -1,468 15,711 ,162 -,5092 ,34690 -1,24569 ,22729 APERTURA AL CAMBIO Se han asumido varianzas iguales ,119 ,731 -2,263 57 ,027 -,4391 ,19398 -,82750 -,05061 No se han asumido varianzas iguales -2,289 19,642 ,033 -,4391 ,19180 -,83962 -,03849 Universalismo Se han asumido varianzas iguales ,525 ,472 -,707 57 ,482 -,1109 ,15684 -,42499 ,20314 No se han asumido varianzas iguales -,783 22,689 ,442 -,1109 ,14173 -,40434 ,18249 Benevolencia Se han asumido varianzas iguales ,876 ,353 ,072 57 ,942 ,0128 ,17691 -,34143 ,36708 No se han asumido varianzas iguales ,059 15,298 ,954 ,0128 ,21850 -,45211 ,47776 TRASCEN- DENCIA Se han asumido varianzas iguales ,633 ,430 -,350 57 ,728 -,0491 ,14010 -,32961 ,23150 No se han asumido varianzas iguales -,290 15,591 ,776 -,0491 ,16935 -,40883 ,31073 Tradicin Se han asumido varianzas iguales 4,372 ,041 1,983 57 ,052 ,4451 ,22445 -,00435 ,89454 No se han asumido varianzas iguales 1,590 15,169 ,133 ,4451 ,28000 -,15112 1,04131 Conformidad Se han asumido varianzas iguales ,484 ,490 -1,120 57 ,267 -,2453 ,21891 -,68363 ,19311 No se han asumido varianzas iguales -1,082 18,435 ,293 -,2453 ,22676 -,72087 ,23034 Seguridad Se han asumido varianzas iguales 1,485 ,228 -,329 57 ,743 -,0535 ,16248 -,37887 ,27185 No se han asumido varianzas iguales -,266 15,261 ,794 -,0535 ,20124 -,48182 ,37479 CONSERVA- CIN Se han asumido varianzas iguales 1,084 ,302 ,299 57 ,766 ,0488 ,16335 -,27833 ,37588 No se han asumido varianzas iguales ,244 ,811 ,0488 ,20013 -,37682 ,47437 29 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA BIBLIOGRAFA Ang, S., Van Dyne, L., Koh, C., Ng, K. 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Internacional Journal of Cross Cultural Management, 2(8), 123-143. 30 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA ALTERACIN DE LA RUTA NO LXICA DE LECTURA EN ALEXICOS HISPANOHABLANTES Ferreres, Aldo UBACYT, Universidad de Buenos Aires INTRODUCCIN Los modelos de doble ruta de lectura asumen que la lectura en voz alta de palabras puede realizarse me- diante un procedimiento de conversin grafema-fonema (ruta no lxica) o por va de la asociacin entre las re- presentaciones ortogrfcas con las representaciones fonolgicas correspondientes (ruta lxica). La ruta lxi- ca permitira leer en voz alta slo las palabras conoci- das (regulares o irregulares) mientras que la ruta no lxica permitira pronunciar las palabras regulares, las palabras nuevas y las no-palabras (secuencias de le- tras pronunciables como TOROSI, QUETU, MEPRI). Una de las evidencias fuertes a favor de este modelo surge del estudio de pacientes en los que una lesin ce- rebral produce el cuadro de alexia fonolgica. En este tipo de alexia se observa una disociacin entre una buena lectura de palabras y una mala lectura de no-pa- labras que en el marco de los modelos de doble ruta se interpreta como una alteracin de la ruta no lxica con conservacin relativa de la ruta lxica (Coltheart, 1996, 2006; Coltheart et al, 2001; Coslett, 2003). Los primeros casos de alexia fonolgica fueron descriptos en pacien- tes franceses e ingleses (Beauvois & Derouesn, 1989; Sartori et al, 1984; Berndt, 1996) cuyos sistemas de es- critura poseen muchas palabras de ortografa irregular (palabras que no pueden pronunciarse correctamente por aplicacin de reglas de conversin grafema fone- ma) y que necesariamente requieren una va de lectura que procese palabras completas. La aplicacin del mo- delo de doble ruta de lectura al espaol y la propia exis- tencia del cuadro de alexia fonolgica en hispanoha- blantes han sido puestos en duda. Ardila, Rosselli y Pin- zn (1989), Ardila (1991; 1998, 2010) consideran que, dada la transparencia del sistema de escritura del espa- ol, no es necesario postular la existencia de una ruta lxica en el lector monolinge hispanohablante. En cier- to que casi todas las palabras del espaol son regulares para la lectura y que por lo tanto su pronunciacin pue- de ser obtenida mediante la conversin grafema-fone- ma. Pero que todas las palabras del espaol puedan ser ledas por mecanismos no-lxicos no implica necesa- riamente que deban ser ledas de esa manera y que la transparencia del sistema de escritura impida el desa- rrollo de un procedimiento lxico de lectura, rpido y ef- ciente. Las primeras publicaciones de pacientes hispa- nohablantes con alexia (Ruiz et al, 1995; Cuetos et al, 1996; Ferreres et al, 1995, 2003, 2005) aportaron evi- dencias a favor del modelo de doble ruta pero el hecho de que todos estos pacientes tuvieran alta escolaridad y/o fueran bilinges condujo a Ardila a sostener una ver- RESUMEN La aplicacin de los modelos cognitivos de doble ruta de lectura ha expandido el estudio de las alexias (altera- ciones de la lectura por lesin cerebral), la descripcin de subtipos (alexias fonolgica, de superfcie y profun- da) y su explicacin en trminos de procesos subyacen- tes alterados y conservados. Sin embargo, con el argu- mento de la transparencia del sistema de escritura del espaol (su alta correspondencia grafema fonema) se ha cuestionado la pertinencia de la aplicacin de la tipo- loga y de los modelos de doble ruta al estudio e inter- pretacin de las alexias en pacientes hispanohablantes. En este trabajo se presenta el estudio de cinco pacien- tes hispanohablantes cuya alteracin de lectura se co- rresponde con el cuadro de alexia fonolgica, uno de los subtipos cuestionados. La discusin aborda la cues- tin de la aplicabilidad de los modelos de doble ruta pa- ra el estudio de la lectura en un sistema de escritura transparente. Palabras clave Alexia Fonolgica Dislexia Lectura ABSTRACT DISORDERS OF NON-LEXICAL READING ROUTE IN SPANISH-SPEAKING ALEXICS PATIENTS The study of alexia (reading disorders by brain damage), the description of subtypes (phonological alexia, sur- face alexia and pure alexia) and its explanation in terms of altered and preserved underlying processes has been expanded by the application of dual-route cogni- tive models of reading. However, keeping in mind the transparency of the Spanish writing system (its high cor- respondence between phoneme-grapheme) the rele- vance of the application of the typology and the dual- route models to the study and interpretation of Spanish- speaking patients with alexia has been questioned. This paper presents a study of fve Spanish-speaking pa- tients whose reading disorders correspond with the pic- ture of phonological alexia, one of the most questioned subtypes. The discussion deals with the question of the applicability of the dual-route models for the study of reading in a transparent writing system. Key words Phonological Alexia Dyslexia Reading 31 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA sin ms matizada de su hiptesis de mediacin fonol- gica obligatoria (1998, 2010) segn la cual las estrate- gias lxicas de lectura podran aparecer bajo circuns- tancias especiales, como bilingismo o entrenamientos excepcionalmente altos en lectura. Davies and Cuetos (2005) parecen adherirse parcialmente a la hiptesis del entrenamiento excepcional cuando sostienen que la baja frecuencia de casos de alexia fonolgica en espa- ol se debe a que el cuadro requiere dos condiciones: sujetos muy escolarizados con grandes lesiones. En este marco resulta importante contar con estudios que verifquen la existencia de casos de alexia fonolgi- ca en hispanohablantes y particularmente en sujetos con baja escolaridad. El objetivo del presente trabajo es presentar cinco nuevos casos de alexia fonolgica en hispanohablantes. MTODO Se realiz un estudio de la lectura en casos selecciona- dos entre los pacientes afsicos que se asistan en dos centros de atencin (Unidad de Neuropsicologa del Hos- pital Eva Pern e Instituto Anselmo Marini de Vicente L- pez). Se seleccionaron aquellos que tuvieran lesin ni- ca y que en su examen clnico del lenguaje con la batera BADA (Ferreres et al 1999) mostraran mejor rendimiento en la lectura de palabras que en la de no-palabras. Se in- cluyeron cinco pacientes, 1 mujer y 4 hombres, entre 54 y 68 aos de edad, diestros, con afasia por ACV isqumi- co en el territorio silviano izquierdo, con dfcit sensorio motor leve o ausente y afasia entre leve y moderada. Uno de los pacientes tena escolaridad universitaria (paciente LT), dos secundaria (pacientes YS y RC) y dos primaria completa (pacientes RR y RM). Los pacientes fueron estudiados con tres pruebas de lectura especialmente diseadas: 1) Lectura de palabras y no-palabras (Ferreres et al, 2003): evala la lectura en voz alta de 45 palabras y 45 no-palabras emparejadas por longitud y complejidad silbica. 2) Emparejamiento palabra escrita dibujo: el paciente debe emparejar una palabra escrita (ejemplo PLAN- CHA, CONEJO) con uno de dos dibujos que son: el blanco y un distractor: en la mitad de los estmulos el distractor es ortogrfco (PLANTA, distractor de PLAN- CHA) y en lo otra mitad semntico (ZORRO, distractor de CONEJO). 3) Decisin lxica con pseudohomfonos (Ferreres et al 2005): consiste en 60 palabras (ejemplo MERLUZA, PRECIO), 30 no-palabras corrientes (ejemplo MERTU- ZA) y 30 no-palabras pseudohomfonas (ejemplo PRE- SIO, CAMIZA, RELIJIN). Se presentan mezcladas al azar y el paciente debe decir si son o no palabras reales. Los pseudohomfonos son no-palabras ortogrfcas pe- ro suenan como palabras reales y pueden ser correcta- mente rechazados si la decisin lxica se apoya en el procesamiento ortogrfco del estmulo. En cambio, si utiliza slo la mediacin fonolgica, no hay forma de dis- tinguir entre una palabra real y un seudohomfono por- que ambos se pronuncian como palabras (fonolgicas). RESULTADOS Lectura de palabras vs. no-palabras: todos los pacien- tes mostraron mejor rendimiento en lectura de palabras que de no-palabras, los porcentajes de respuestas co- rrectas para palabras y no palabras fueron respectiva- mente los siguientes: LT 100-56; YS 99-22; RC 100-57; RR 91-62; RM 42-18. Comparando los pacientes, se ob- serva que el rendimiento en lectura de palabras oscil entre 100 y 42% y el de no-palabras entre 62 y 18%. Sin embargo, en cada uno de los casos la diferencia entre palabras y no-palabras fue signifcativa (chi2, p <0,001). Comprensin de palabras escritas: todos los pacientes mostraron 100% de respuestas correctas en la prueba de emparejamiento palabra escrita dibujo. Decisin lxica con pseudohomfonos: en esta prueba los pacientes mostraron los siguientes porcentajes de respuestas correctas: LT 89; YS 100; RC 84; RR 71; RM 100. Dos pacientes, YS y RM, rindieron al tope (100%) lo que contrasta con su bajo rendimiento en la lectura de no-palabras (22 y 18% respectivamente). Los pa- cientes LT y RC no alcanzaron el tope pero mostraron un rendimiento bastante alto (89 Y 84%) y sus errores no afectaron especialmente a los pseudohomfonos. El rendimiento ms bajo fue el de RR y en este caso la ma- yor cantidad de errores se debi a la produccin de fal- sos positivos en los pseudohomfonos. DISCUSIN Los resultados del estudio muestran que en cinco pa- cientes hispanohablantes monolinges, con diverso nivel de escolaridad (desde primaria completa hasta universi- taria) se observ una disociacin en la lectura caracteri- zada por un mejor rendimiento en lectura de palabras que de no-palabras. Adems, y a pesar de las difculta- des para la lectura de no-palabras, los pacientes mostra- ron un rendimiento alto en el reconocimiento ortogrfco (decisin lxica) y en el acceso al signifcado de palabras escritas (emparejamiento palabra escrita dibujo). Estos resultados permiten refutar varias hiptesis sobre las alexias en hispanohablantes y sobre los modelos de lectura: 1) En primer lugar el patrn de rendimiento observado en los cinco pacientes corresponde al de la alexia fono- lgica, cuadro descripto inicialmente en pacientes fran- co y angloparlantes y cuya existencia en espaol haba sido puesta en duda por Ardila (1991, 2010). El hallazgo de estos cinco nuevos casos de alexia fonolgica entre los pacientes afsicos de dos centros de atencin su- giere que el cuadro no slo existe en hispanohablantes sino que parece ms frecuente de lo que se supuso. Es posible que la rareza de casos publicados de alexia fo- nolgica en hispanohablantes se deba ms a las insuf- ciencias del mtodo de estudio de las alexias que a las particularidades de la lengua. 2) El patrn de alexia fonolgica observado en los cinco casos constituyen evidencia en contra de la hiptesis 32 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA de la mediacin fonolgica obligatoria en espaol. Ardi- la (1998) sostiene que la lectura en espaol est siem- pre mediada por la fonologa y que tanto las palabras como las no-palabras son ledas mediante la misma es- trategia grafofonmica (conversin grafema fonema). Esta hiptesis es incompatible con nuestros datos. Los cinco pacientes descritos, a pesar de tener un bajo ren- dimiento en lectura de no-palabras (tarea que depende de la integridad del mecanismo de conversin grafema fonema) muestraron un rendimiento al tope o muy alto en la lectura de palabras. El modelo de doble ruta expli- ca este patrn como resultado de la alteracin de la ru- ta no lxica con conservacin relativa de la ruta lxica, el modelo de mediacin fonolgica obligatoria no puede explicarlo. 3) Nuestros resultados tambin contradicen la hiptesis de que el reconocimiento y el acceso al signifcado de las palabras escritas dependen de la mediacin fonol- gica. Como se seal, los cinco pacientes tuvieron un bajo rendimiento en la lectura de no-palabras lo cual su- giere serias difcultades para la mediacin fonolgica (ruta de conversin grafema fonema) y, pese a ello, tu- vieron un alto rendimiento en el reconocimiento ortogr- fco (decisin lxica) y en el acceso al signifcado de pa- labras escritas (emparejamiento palabra escrita dibujo). Estos datos sugieren que podan realizar el reconoci- miento y el acceso al signifcado de las palabras escri- tas por una va distinta a la mediacin fonolgica. El mo- delo de doble ruta puede incluir estos datos asumiendo que el reconocimiento y la comprensin se realizan por la ruta lxica con acceso directo a la ortografa y al sig- nifcado de las palabras. El modelo de mediacin fono- lgica obligatoria no puede explicarlo. 4) Finalmente, nuestros resultados tambin permiten re- chazar la hiptesis de que el desarrollo de una ruta lxi- ca con capacidad para el reconocimiento y compren- sin directos de palabras escritas (sin mediacin fono- lgica) slo se producira en casos con entrenamiento excepcional en lectura. Dos de nuestros pacientes con alexia fonolgica tenan escolaridad primaria y de nin- guna manera podan considerarse como ejemplos de un entrenamiento excepcional en lectura. Pese a la ba- ja escolaridad, la lesin puede producir una disociacin con lectura lxica ms conservada y lectura no lxica ms afectada. Como conclusin, nuestros casos de alexia fonolgica muestran que es posible observar este patrn en pa- cientes hispanohablantes, aportan evidencia contra las hiptesis de la mediacin fonolgica obligatoria para el espaol y a favor de las asunciones de los modelos de doble ruta de la lectura. BIBLIOGRAFA Ardila, A. (1991). Errors resembling semantic paralexias in Spa- nish-speaking ahasics. Brain and Language, 4, 437-445. Ardila A. 1998. Semantic paralexias in the Spanish language. Aphasiology 12, 885-900 Ardila A. (2010). Alexia (Medlink. Neurology). March 22, 2010. Ardila A, Rossell M & Pinzon O (1989). Alexia and agraphia in Spanish speakers. In A. Ardila & F. Ostrosky-Solis Brain Organi- zation of Language and Cognitive Processes Plenum Press, New York and London. Beauvois & Derouesn. 1989. Phonological alexia: Three disso- ciations. 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Key words Addictions Beliefs Consumption Cognitive-behavioral INTRODUCCIN: A partir del trabajo que realizamos da a da en el Servi- cio de Adicciones del Hospital lvarez, hemos visuali- zado en el ltimo ao un incremento signifcativo de consultas para solicitar un tratamiento por drogadepen- dencia. Result de nuestro inters analizar cmo se manifestaban desde el primer encuentro las diferentes creencias adictivas propuestas por el modelo cognitivo de Beck para dicha poblacin. Por lo tanto, este estudio se propuso determinar la importancia de tales creen- cias en la evolucin de la patologa, para luego, en la prctica clnica, reemplazarlas por creencias control y erradicar el consumo. Cabe destacar que esta presentacin es slo el primer adelanto de un estudio de investigacin ms amplio, y de tipo longitudinal, en el que se pretende, en un lapso inicial de 3 aos, evaluar tanto variables epidemiolgicas, co- mo de historia de consumo, niveles de creencias disfun- cionales, nivel de efectividad de nuestro tratamiento y otras variables que nos permitirn mejorar nuestro nivel de atencin a travs del monitoreo permanente. OBJETIVOS: Objetivos generales: Realizar un aporte a la psicologa de las adicciones Efectuar un anlisis que permita ampliar el campo de la psicologa cognitiva-comportamental. Objetivos especficos: Describir las caractersticas socio-demogrfcas de la poblacin que consulta en el equipo de adicciones del hospital T. lvarez. Explorar el contexto bio-psico-social e historia de con- sumo de cada individuo. Analizar que sustancias resultan ms problemticas RESUMEN Para esta investigacin se realiz un cuestionario por medio del cual se ha indagado sobre el entorno psico- social de la persona a admitir y de su historia de consu- mo, aplicado a 49 sujetos, que concurrieron a una en- trevista de admisin en el Servicio de Adicciones del Hospital lvarez, entre agosto de 2008 a marzo del 2009. Priorizamos para este estudio la edad del indivi- duo, edad de inicio de consumo, frecuencia y tipo de droga consumida, cantidad de tratamientos anteriores y el puntaje obtenido en el cuestionario de creencias so- bre el consumo de Beck. Los objetivos consisten en describir las caractersticas de la poblacin que consul- ta en el servicio de adicciones del hospital, y detectar las creencias sobre el consumo de sustancias en esta poblacin. El anlisis de los resultados demostr los di- ferentes niveles de creencias sostenedoras del consu- mo de la poblacin estudiada de acuerdo a su edad cro- nolgica y tiempo de evolucin de la patologa. Esto po- dra indicar que a medida que la patologa evoluciona, se van instalando en el adicto creencias disfuncionales acerca del consumo que refuerzan los sntomas y per- petan la enfermedad. El anlisis de los mismos se efectu utilizando el modelo desarrollado por Beck para el tratamiento de las adicciones. Palabras clave Adicciones Creencias Consumo Cognitivo-conductual ABSTRACT BELIEFS ASSOCIATED WITH THE CONSUMPTION IN ADDICTED PATIENTS OF THE HOSPITAL GENERAL DE AGUDOS TEODORO LVAREZ For this research was carried out a questionnaire by means of which it has unearthed on the psycho-social en- vironment of the person to admit and its history of con- sumption, applied to 49 subjects, who attended an inter- view for admission in the Service of Addictions of the Hospital lvarez, between August 2008 to March 2009. We prioritize for this study, the age of the individual, age of consumption initiation, frequency and type of drug con- sumed, amount of earlier treatments and score obtained in the questionnaire of beliefs about the consumption of Beck. The objectives of this research consist in describ- ing the characteristics of the population that consults on the service of addictions of the hospital, and detect the beliefs about the consumption of substances use in this population. The analysis of the results showed different 34 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA para nuestros pacientes y su frecuencia de consumo. Indagar las creencias sobre el consumo de drogas (le- gales e ilegales) Examinar las creencias y el consumo y relacionarlo con las etapas vitales. MARCO TERICO: Mucho se ha dicho, desde diferentes perspectivas teri- cas, acerca de las adicciones a lo largo de la historia de la psicologa. Es por ello que nos es necesario sealar cul es el prisma a la luz del que analizaremos nuestros datos y sacaremos nuestras conclusiones. Nuestra l- nea terica se nutre de diferentes aportes, principal- mente de la psicologa cognitiva, los cuales guan nues- tra prctica hospitalaria cotidiana, y que utilizaremos tambin en el desarrollo de esta investigacin. Para comprender desde donde estudia la psicologa cog- nitiva el fenmeno de las adicciones, veamos una afrma- cin de Beck y cols. (1993), de acuerdo a la perspectiva cognitiva, la forma en que las personas interpretan deter- minadas situaciones, infuye en sus sentimientos, moti- vaciones y acciones. Sus interpretaciones, a su vez, se modelan de distintas formas por las creencias pertinen- tes que se activan en estas situaciones. Una situacin social, por ejemplo, puede activar una creencia idiosin- crsica como la cocana me hace ms sociable () y producir el craving de utilizar la droga. Algunas creen- cias especfcas como estas constituyen una vulnerabili- dad al abuso de sustancias. Cuando se activan ante cir- cunstancias determinadas predecibles, las creencias in- crementan la probabilidad del uso continuado de droga o alcohol (esto es porque estimulan el craving) Esto signifca que las creencias, son uno de los vehcu- los de la enfermedad, para su perpetuacin. Se organi- zan en verdaderas redes, y determinan la evolucin de la enfermedad. Por este motivo, toda terapia cognitiva orientada al tratamiento de cuadros adictivos, focalizar sus esfuerzos teraputicos en el cambio de creencias, a fn de que el paciente logre trocar sus creencias adic- tivas disfuncionales, por creencias favorecedoras de la abstinencia. Para que esto sea efectivo, es necesario intervenir en el estadio motivacional especfco, a fn de lograr algn efecto con la misma. Dentro de esta lnea terica, existen una serie de su- puestos acerca de la psicologa de las adicciones, so- bre los que nos apoyaremos en esta investigacin, y que veremos a continuacin: *Las creencias acerca del consumo mantienen la adic- cin y proporcionan el trasfondo a la recada: Esto sig- nifca que las creencias que las personas tienen acerca de su propio consumo sostienen la adiccin, ya que in- crementan efectivamente la probabilidad de que la per- sona consuma. Esto se debe a que, de acuerdo a nues- tra perspectiva, estas creencias suelen activarse frente a una gran serie de estmulos y desencadenan el ciclo del craving que, provoca sensaciones desagradables en la persona y desemboca en el consumo. *Las creencias tambin modelan las reacciones de los individuos ante las sensaciones fisiolgicas asociadas con la ansiedad y el craving: Esto hace que simples sensaciones desemboquen en reacciones que llevan a la persona al consumo. *Estas creencias adictivas son comunes a la mayora de las personas que padecen una adiccin: Esto signif- ca que estas creencias son compartidas por la mayora de las personas que padecen adiccin. Aunque se for- mulen de diferentes formas, su contenido es similar. MARCO METODOLGICO: Nivel de investigacin: La investigacin es de tipo exploratoria, pretendindose observar los fenmenos tal y como se dan en su con- texto natural, para posteriormente analizarlos. As, el estudio se centrar explorar las creencias que sostie- nen el consumo de drogas con la mayor precisin posi- ble; es decir, se tiene como fnalidad examinar un pro- blema de investigacin y a su vez, describir los hallaz- gos y propiedades del fenmeno. Poblacin y Muestra: La poblacin estudiada est conformada por todas las personas que han solicitado una entrevista de admisin en el equipo de adicciones del hospital T. lvarez, ha- yan acudido a dicha entrevista (solos o con familiar) y si- do designadas en forma aleatoria al admisor que admi- nistraba los cuestionarios. Se recogi la informacin entre los meses de agosto de 2008 y abril del 2009. a.- Criterios de Inclusin: - Todos los pacientes que asistan a la entrevista de ad- misin del Servicio de Adicciones de Salud Mental de dicho hospital. b.- Criterios de Exclusin: - Aquellos pacientes que padezcan trastornos psiqui- tricos que impiden la aplicacin del instrumento de re- coleccin de datos (tales como Demencia o Retraso Mental Grave). - Pacientes con trastorno psictico agudo. Contamos con una muestra de 49 casos, 44 varones y 5 mujeres, entre 16 y 53 aos de edad. Esta muestra no establece una seleccin representativa, en tanto que la misma constituye una primera etapa investigativa y de aproximacin al campo. Tcnicas e Instrumentos de Recoleccin de Datos: a.- Hoja de Registro de Informacin Epidemiolgica conteniendo los siguientes tems: Nombre y Apellido, Edad, Sexo, Estado civil, Educacin, Cantidad de hijos, condicin laboral, Vivienda, Grupo conviviente, Cober- tura de salud, Motivo de consulta, Indicacin teraputi- ca, Derivacin b.- Hoja de registro de Historia de Consumo conte- niendo los siguientes tems: Edad de primer consumo, Sustancia de inicio, Otras sustancias consumidas, Sus- tancia principal actual, Frecuencia de uso, Sustancia problema, Frecuencia de uso de la sustancia problema, 35 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA con quienes consume, Combina dos o ms sustan- cias?, Cules?, Tratamientos previos de adicciones, modalidad y motivo del alta, Otros tratamientos, Tiene familiares que consumen, Antecedentes de enfermedad mental familiar. c- Genograma. d- Cuestionario Acerca del Abuso de Sustancias (Versin desarrollada por Fred Wright) Con una escala de 20 tems que evalan de 1 a 7 el nivel de acuerdo con cada tem. El puntaje mnimo de la escala es 20 y el mximo posible 140. A mayor puntaje mayor acuerdo con las creencias de consumo que mantienen la enfer- medad de la adiccin. El mayor puntaje en esta escala, tal como lo sealan su autor y A.T. Beck, sugiere la pre- sencia de ms creencias disfuncionales sobre el consu- mo y que se encuentran ms instaladas, por lo que la recuperacin del paciente, requerira un mayor esfuer- zo teraputico, y la utilizacin de mayores recursos. Tcnicas de anlisis de datos: Tanto para la informacin epidemiolgica como la de historia de consumo, se tradujeron a porcentajes varia- ble por variable, determinando luego las medias esta- dsticas y su distribucin en curva de Gauss. La informacin contenida en el genograma no fue utili- zada para esta presentacin. Por ltimo, para el anlisis del cuestionario sobre creen- cias de consumo, se tomaron los puntajes totales obte- nidos por los entrevistados en el cuestionario. CONCLUSIONES: A fn de realizar esta exposicin, hemos seleccionado algunas variables que, a nuestro parecer, son signifca- tivas a fn de establecer el tipo de poblacin que acude a nuestro servicio, as como a los fnes de nuestra in- vestigacin sobre creencias asociadas al consumo. Veamos los primeros datos que arrojaron nuestras in- dagaciones: Sustancia Problemtica: Esta variable representa aquella sustancia que el paciente reconoce como ms problemtica para l, dentro del universo de sustancias que consumi y que consume actualmente. Como ve- mos en el grfco, sobre 49 casos indagados, el 43% de la muestra reconoce como ms problemtico en su vi- da, el consumo de cocana, seguido de un 29% para la pasta base de cocana o paco. Siguiendo, el 8% de la muestra declara que el consumo de alcohol es el ms problemtico. Podramos inferir que este elevado por- centaje se debe al gran nivel de deterioro social y labo- ral que ocasiona el uso de estas sustancias (cocana, paco y alcohol), por lo que se torna mucho ms proble- mtico para el paciente que el consumo de otras sus- tancias. Un 10 % de la muestra no identifca ninguna sustancia como problemtico, con lo que podramos su- poner, para estos pacientes, que fueron impulsados al tratamiento por un motivo diferente al de su recupera- cin, tales como reducir la presin familiar, cumplir una indicacin judicial, etctera, puesto que para ellos, el consumo no resulta problemtico y por esta causa, es probable que no deseen abandonarlo. Frecuencia de Consumo: La frecuencia de consumo est dada por la cantidad de veces por semana que con- sume la droga de su preferencia (por lo general, la ms problemtica). Recordemos que estos datos fueron to- mados en la entrevista de admisin, por lo que estos pa- cientes no haban sido an sometidos a ninguna clase de terapia y estos datos eran actuales al momento de la ad- misin. Como puede verse en el grfco, el 37% de los pacientes que llegan a solicitar tratamiento a nuestro ser- vicio, consume a diario, el 24% consume 3 veces por se- mana o menos, y el 10% lo hace 4 veces por semana o ms. Esto signifca que el 71% de los pacientes que ad- mitimos en el servicio, consumen 3 veces por semana o ms, llegando a un consumo diario en muchsimos ca- sos. Esto implica un alto nivel de evolucin de la patolo- ga, al momento de iniciar el tratamiento. Aos de Consumo: Esta variable est representada por la cantidad de aos de consumo que tienen nuestros pa- cientes. El 51% de nuestros pacientes han consumido entre 1 y 10 aos. El 36% lo ha hecho entre 11 y 20 aos, y el 13% ha consumido por ms de 20 aos. Esto signif- ca que ms de la mitad de nuestros pacientes llegan a tratamiento en los primeros 10 aos de consumo, lo cual podra resultar un dato alentador. Sin embargo, si relacio- namos esta variable con la anterior (frecuencia de consu- mo), observamos que los pacientes llegan con un alto consumo, por lo que podra inferirse que en relativamen- te poco tiempo, la mayora de nuestros pacientes, ha de- sarrollado un alto nivel de consumo. Puntaje del cuestionario sobre creencias acerca del consumo: Hemos analizado los puntajes obtenidos en el cuestionario de Fred Wright mencionado ms arri- ba. Sobre 40 casos, en una escala entre 20 y 140, la media resulto ser de 53.32, que es una califcacin no muy elevada. Sin embargo, y dado lo pequea de la muestra, no pueden sacarse conclusiones determinan- tes hasta no evaluar un gran nmero de casos ms. Por ltimo, comparamos los datos obtenidos separando a los pacientes de acuerdo al tiempo de consumo (en grupos de a 10 aos) y el puntaje obtenido en el cues- tionario sobre creencias de consumo. El resultado de- mostr una pequea tendencia, respecto a un aumento en el puntaje, de acuerdo aumentaban los aos de con- sumo. Esto sin embargo, resulta invalidado en el grupo entre 21 y 30 aos de consumo que observan una me- dia de 49.8. Cabe destacar que en este grupo el nme- ro de casos fue de solo 5. En el grupo de entre 1 a 10 aos de consumo, los pa- cientes registraron puntajes que dieron una media de 50.7 y en el grupo siguiente (11 a 20 aos de consumo), la media fue de 52.85, observndose la tendencia antes mencionada. Queda precisar en los prximos avances, las diferentes relaciones entre estas variables, ya que podran resultar signifcativas para el desarrollo posterior de tratamien- tos ms efectivos, focalizados en el cambio de creen- cias de acuerdo al perodo evolutivo de la enfermedad. 36 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA BIBLIOGRAFA Beck, A. T; Wright, F; Newman, C y Liese, B. (1993): Terapia cognitiva de las drogodependencias. Ed. Paidos. Argentina. DSM-IV-TR (1997) Breviario. Criterios Diagnsticos. Ed. Masson. Espaa. Graa, J.L (1994): Conductas adictivas. Teora, evaluacin y tra- tamiento. Ed. Debate. Espaa. Martnez Gonzlez, M. G; Verdejo Garca, A. (2010): Creencias bsicas y adictivas y craving. Centro Provincial de Drogodepen- dencias de Granada. Universidad de Granada. Espaa. Vzquez, C. (2003): Tcnicas cognitivas de intervencin clnica. Ed. Sntesis. Espaa. 37 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA ALTERACIONES EN EL PROCESAMIENTO DEL NMERO Y LA REALIZACIN DE CLCULOS: UN ESTUDIO DE CASO Leiva, Samanta Daniela; Jacubovich, Silvia Facultad de Psicologa, Universidad de Buenos Aires INTRODUCCIN Se considera que la capacidad de utilizar nmeros constituye en s misma un dominio cognitivo y se han formulado modelos de procesamiento, como los de Mc- Closkey y cols. (1985-1992), Dehaene y Cohen (1995) y Power y Dal Martello (1990-1997) que explicitan las re- presentaciones y operaciones que forman parte del do- minio diferenciando nombres, semntica numrica y clculo. As se describe un mdulo para los procedi- mientos de clculo y otros mdulos que contienen infor- macin acerca de los nombres de los nmeros o de su representacin arbiga y sus transcodifcaciones. El modelo de Dehaene y Cohen resulta ms descriptivo que otros respecto de las diferencias de procesamiento y nivel de difcultad de los diferentes tipos de clculos (suma, resta y multiplicacin), en tanto que en lo que respecta a las transcodifcaciones los tres grupos de autores mencionados hacen referencias a las mismas en forma diferenciada respecto a la activacin semnti- ca o no durante este proceso, a la infuencia de un cdi- go sobre otro, y al valor del cero en la notacin arbiga. La integridad de las distintas representaciones de forma y sus relaciones se evalan mediante tareas de trans- codifcacin que implican el pasaje de un formato a otro (por ejemplo dictado, lectura de nmeros, repeticin, y otros.). El clculo, adems de la integridad de las repre- sentaciones de forma y contenido, requiere el dominio de los algoritmos (procedimientos) implicados en las operaciones. Estudiamos el uso de nmeros y la realizacin de clcu- los en una adolescente de 17 aos de edad con difcul- tades en el desarrollo de la funcin. OBJETIVOS Desagregar los procesos numricos desarrollados ade- cuadamente de aquellos no logrados en su totalidad en un caso de discalculia Descripcin y proporcin de los errores emergentes MTODO Sujeto: GA, 17 aos, fem., 11 aos de escolaridad (cur- sa el ltimo ao del colegio secundario). Trastornos de aprendizaje dislxicas y discalclicas Evaluacin: Evaluacin neuropsicolgica general de las funcines cognitivas: Test Escala de Inteligencia para nios de Wechsler (WISC- III) ATENCIN: Test Amplitud atencional (WRAML); Test RESUMEN Las habilidades matemticas referen a aquella serie de capacidades mediante las cuales los individuos se repre- sentan las cantidades utilizando sistemas de numeracin y sus cdigos notacionales caractersticos, as como la adecuada realizacin de operaciones bsicas para el clculo (Dansilio, S., 2008). Ellas son fundamentales pa- ra desenvolvernos en la vida cotidiana ya que nos permi- ten organizar el tiempo y el espacio, trabajar, cobrar por una labor, comprar y vender, manejar dinero en general y otras tantas actividades. La alteracin de esta funcin es sumamente discapacitante para los sujetos que la pade- cen y se la denomina acalculia (si es adquirida por lesin cerebral), discalculia (en el caso de que se trate de una alteracin en su desarrollo normal). El presente trabajo tiene como objetivo el estudio de caso de un sujeto de 17 aos, discalculico, cuyas alteraciones se encuentran en los procesos de transcodifcacin numrica y en la reali- zacin de clculos. Para ello nos basamos en tres mode- los tericos de procesamiento numrico: McCloskey et al. (1985-1990), Dehaene y Cohen (1995) y Power y Dal Martello (1990-1997) Palabras clave Discalculia Transcodifcacin Numrica Clculo ABSTRACT DISTURBANCES OF NUMBER PROCESSING AND CALCULATION: A SINGLE CASE STUDY Arithmetical skills are refer to that set of skills by which individuals represent quantities using numbering sys- tems and codes notational features, as well as the prop- er conduct of basic operations for the calculation (Dan- silio, S., 2008). They are essential to function in every- day life and allow us to organize time and space, work, charging for work, buying and selling, managing money in general and many other activities. Alterations in this function constitute an extremely disabling disorder for individuals who suffer it and is called acalculia (the func- tion becomes altered as result of a brain injury) or dys- calculia (in the case concerned an alteration in normal development). We studied a 17 years old subject with dyscalculia, who suffer diffculties in transcodifcation and calculation processes. We have taken as reference three related theoretical models: the McCloskey et al. (1985-1990), the Dehaene and Cohen (1995) and other one proposed by Power and Dal Martello (1990-1997) Key words Dyscalculia Number transcoding Calculation 38 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA Atencin Sostenida (Trail Making Test) Test Control atencional (Trail Making Test) MEMORIA. Memoria de Trabajo: Test Memoria de N- meros y Letras (WRAML); Test Memoria Episdica (RCFT:Figura Compleja de Rey) Test RAVLT (Lista Au- ditivo Verbal de Rey) FUNCION EJECUTIVA Test de fuencia verbal; WCST (Wisconsin Card Sorting Test); Evaluacin de los procesos lectores Test Prolec-Se Evaluacin del uso de nmeros y clculo Batera de Investigacin - Screening Pruebas ad-hoc: Adicin y sustraccin escritas:. 59 sumas de las cuales 29 incluyen ceros (30 sin ceros), y 30 incluyen el procedimiento de llevarse (29 sin lle- varse) 62 restas de los las cuales 31 incluyen ceros (31 sin ce- ros), y 32 requieren el procedimiento de pedir prestado (30 sin pedir). Transcodifcacin numrica 273 estmulos de diferente tamao (de 1 a 5 cifras) y complejidad sintctica (presencia/ausencia de ceros) RESULTADOS Evaluacin neuropsicolgica: - Potencial intelectual bajo (CI: Escala completa 69 E. Verbal 73 E. Ejecucin 70) Difcultad para realizar pro- cesos de anlisis y sntesis con material verbal. Difcul- tad en las relaciones numricas y las operaciones de clculo. - Amplitud atencional auditiva. (WRAML: Puntaje Bruto 16; Puntaje Escalar 5) Normal - Sostenimiento atencional (Trail Making Test Parte A: Tiempo: 34.35) Normal - Control Atencional (Trail Making Test Parte B: Pje. bru- to: 49.02 Pje. corte: 75) Normal - Memoria: Memoria de Trabajo, Nmeros y Letras (WRAML Pje.Bruto 7 Pje.Escalar: 4) memoria de traba- jo auditivo verbal levemente descendida. - Memoria Episdica (RCFT). Descendido, difcultades en el proceso de recuperacin de la memoria visual, con velocidad de procesamiento normal. - Memoria Auditiva verbal (RAVLT B: 7; E6: 10; E7: 9) Levemente descendida. - Funcin ejecutiva: (Test de fuencia verbal: Semntica 18, Fonolgica 13) Normal (WCST Ens. administrados 78 Rtas. Correctas 63) Normal Procesos de Lectura: (Prolec-Se rendimiento fuera de percentilos): Dislexia. Procesamiento de nmeros y clculo Batera de screening: Difcultades en la ejecucin de clculos (restas y su- mas) y en los procesos de transcodifcacin (E: Auditiva S: Arbigo; E. ArbigaS. Verbal oral). Preservacin del conteo y su moviliad, de la nocin de cantidad y del clculo mental. Pruebas ad-hoc Protocolo de clculo de sumas y restas escritas: Resultados cuantitativos de sumas (Tabla 1): 18,64% de errores (11/59) lo que indicara solo leves difcultades en la realizacin de sumas. Dentro de las sumas que impli- can el procedimiento de llevarse, muestra un 26,67% de errores (8/30), mientras que sobre aquellas sumas que no implican este procedimiento GA tiene un 10,34% de errores (3/31). GA comete ms errores en la realiza- cin de sumas cuyos sumandos no poseen ceros (24,14% de errores), que en aquellas que incluyen la uti- lizacin de ceros (13,33% de errores). Total de aciertos 48/59
Total de errores 11/59 % de aciertos 81,36 % de errores 18,64 Con cero Total de aciertos 26/30
Total de errores 4/30 % de aciertos 86,67 % de errores 13,33 Sin cero Total de aciertos 22/29
Total de errores 7/29 % aciertos 75,86 % de errores 24,14 Sin llevarse Total de aciertos 26/29
Total de errores 3/29 % de aciertos 89,66 % de errores 10,34 Llevarse Total de aciertos 22/30
Total de errores 8/30 % de aciertos 73,33 % de errores 26,67 Tabla 1: Anlisis de aciertos y errores en las sumas rea- lizadas por GA Anlisis cualitativo de los errores en las sumas: De los 11 errores cometidos por GE, 8 son resultan de realizar una sub-suma individual inadecuada dentro de una operacin, por ejemplo: 9+5=15 (en 8029+5285), 8+4=10 (en 2308+1234), 3+2=4 (en 358+231). En dos ocasiones las fallas de GA pueden ser interpre- tadas del mismo modo que las anteriores, aunque tam- bin coinciden con otro tipo de error posible: la realiza- cin de una operacin inadecuada: multiplicacin en lu- gar de suma. Ejemplo de ellos son: 8043+1702 = 9746 (donde puede interpretarse el error de 3 + 2 = 6 como la aplicacin de multiplicacin en lugar de suma, 2 x 3 = 6); y 239+8301=8539 (pasible de interpretarse como como aplicacin de multiplicacin y no de suma, ya que en lu- gar de 9 + 1= 10; 9 x 1 = 9). No se observan errores de procedimiento. Resultados cuantitativos en restas (Tabla 2): De la tota- lidad de las restas realizadas por GA el 43,55% de los resultados son incorrectos (27/62). La mayora de los errores se observan en las restas que requieren del pro- cedimiento de pedir prestado (sobre un total de 32 es- tmulos en los que se requiere realizar el procedimiento de pedir prestado hubo un 62,5% de errores- 20/32). Las fallas sobre blancos que no requeran la aplicacin del procedimiento de pedir prestado fueron menores (23,33% , 7 sobre un total de 39). En las sustracciones 39 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA cuyos trminos incluyen ceros falla en el 32,26% de los casos (10/31) y en aquellas que no los incluyen comete un 54,48% de errores (17/31). La presencia de ceros disminuye la cantidad total a procesar en cada instancia Total de aciertos 35/62 Total de errores 27/62 % de aciertos 56,45 % de errores 43,55 Con cero Total de aciertos 21/31 Total de errores 10/31 % de aciertos 67,74 % de errores 32,26 Sin cero Total de aciertos 14/31 Total de errores 17/31 % aciertos 45,16 % de errores 54,84 Sin pedir Total de aciertos 23/30 Total de errores 7/30 % de aciertos 76,67 % de errores 23,33 Pidiendo Total de aciertos 12/32 Total de errores 20/32 % de aciertos 37,5 % de errores 62,5 Tabla 2: Anlisis de aciertos y errores en las restas rea- lizadas por GA Anlisis cualitativo de errores en las restas: GA muestra una adecuada capacidad para el encolumnar los com- ponentes de la resta y llevar a cabo la operacin. En la mayora de los casos hace buen uso del procedimiento de pedir prestado si la resta lo amerita, aunque se han encontrado algunas excepciones: en 2 ocasiones que implican el pedir prestado a un cero (506-28; 9032- 351) GA realiza el doble pedido (primero al cero y luego al nmero a la izquierda de ste) pero cuando debe qui- tarle una unidad al nmero ahora transformado en 10 ella lo cambia a un 5, en lugar de cambiarlo a un 9. En ambas restas comete el mismo error. De las 27 operaciones de resta errneas, la mayor par- te de fallas (21/27) fueron el resultado de difcultades en la manipulacin de cantidades que superan las unida- des (dentro de cada columna), es decir en la realizacin adecuada de la sustraccin parcial en las que, por pe- dir prestado, el minuendo implica un nmero mayor de 10 Ejemplos de este tipo de error son: 2348-175=2163 (donde realiza adecuadamente la primer sustraccin, pide correctamente, pero al sustraer 1 4-7 le da 6 en lu- gar de 7); 453-68=365 (aqu realiza bien el procedi- miento de pedir prestado, pero falla al sustraer 6 de 1 4). En otras tres restas (3/27) las fallas aparecieron al sus- traer 9-3 colocando como resultado 3 en lugar de 6. Hu- bo adems otras fallas de ese tipo, que no superan las unidades, como por ejemplo, 9-6=2, 8-4=5, 9-7=3, 8- 7=3, 3-1=1, etc. consideradas fallas en la exactitud. Por otra parte algunos de estos errores en la sustraccin podran ser interpretados como una falla en la aplicacin de la operacin adecuada: el hecho de que en 3 ocasio- nes haya calculado 9-3=3, podra interpretarse como el uso inadecuado de la divisin, ya que 9/3=3. Adems en otros casos, se podra pensar que utiliza la multiplicacin en lugar de la resta, por ejemplo: 2-1=2 (en 2 oportunida- des comete el miso error), 8-1=8. Y en una sola ocasin utiliza la suma en lugar de la multiplicacin (2-1=3). En algunos casos realiza bien el procedimiento de pedir prestado, pero no escribe los resultados de las operacio- nes, dejndolas incompletas, por ejemplo: 746-159, don- de pide adecuadamente: 6 7 13 4 1 6 -159 pero no escribe nin- gn resultado para esa operacin. Otros ejemplos son aquellos en los que escribe solo algunos de los resulta- dos parciales de las sub-restas individuales, pero deja los lugares vacos que no completa con los resultados (realiza los procedimientos adecuadamente, incluso los de pedir presto - no grafcados en los ejemplos): a) 5634 - 1928 = 3_05 b) 8475 - 5283 = 31_2 c) 9437 - 2465 = 6_ _ 2 d) 786 - 97 = 6_ _ Protocolo de Transcodificacin numrica Resultados de la transcodificacin verbal-arbiga (dic- tado): Del total de 273 estmulos, GA mostr error ante el 46,52 % de ellos (127/273). Todos los errores recayeron sobre los blancos conformado por 3 o ms dgitos. As, sobre un total de 245 blancos de entre 3 y 5 cifras, GA cometi errores ante el 51,83 % de los estmulos. Los fallos fueron clasifcados en dos instancias diferentes: - De acuerdo al tipo de blanco sobre el que recayeran, segn stos estuvieran conformados sin ceros, ej. 53.249 (Blancos Lexicales BL); con ceros slo en posi- cin de decena, caso en el que el cero se considera con valor lxico, ej.:20.841 (Blancos Lexicales con Ceros BL0); con ceros en otras posiciones, caso en el que el cero se considera con valor sintctico puesto que res- guarda el lugar o la columna que no posee elementos, ej.: 16.904 (Blanco Sintctico -BS) y, por ltimo, blancos mixtos, aquellos que incluyen ambos tipos de ceros, ej.: 10.093 (BM) (Tabla 3) Total de aciertos 118/245
Total de errores 127/245 % de aciertos 48,16 % de errores 51,84 Blancos Lexicales sin ceros -BL Total de aciertos 21/42
Total de errores 21/42 % de aciertos 50,00 % de errores 50,00 Blancos Lexicales con ceros -BL0 c/ cero lexical Total de aciertos 16/42
Total de errores 26/42 % aciertos 38,10 % de errores 61,90 Blancos Sintcticos -BS c/ cero sintctico Total de aciertos 57/98
Total de errores 41/98 % de aciertos 52,17 % de errores 41,83 Blancos Mixtos -BM c/ceros lexicales y sintcticos Total de aciertos 24/63
Total de errores 39/63 % de aciertos 38,10 % de errores 61.90 Tabla 3: Aciertos y errores en la transcodifcacin ver- bal-arbiga de acuerdo al tipo de blanco sobre el cual recaen - De acuerdo al tipo de error, en cuatro grupos diferen- tes: errores lxicos (omisin, sustitucin o agregados de elementos lexicales -EL), errores sintcticos (omi- 40 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA sin de ceros sintcticos -ES omis), errores sintcticos por agregado de ceros (ES agreg) y errores mixtos (aquellos que involucran fallas lexicales y sintcticas -EM) (Tabla 4) Resultados de la transcodificacin arbigo - nombre (lectura en voz alta de numerales arbigos): En esta ta- rea GA mostr dudas y titubeos, aunque logr transco- difcar correctamente el 100% de los estmulos. Total de errores 127/245 % de errores 51,84 Error lexical - EL Total de errores 14/245 % de errores 11,02 Error sintctico por omisin de cero - ES omis Total de errores 4/245 % de errores 3,14 Error sintctico por agregado de cero - ES agreg Total de errores 99/245 % de errores 77,95 Error mixto - EM Total de errores 10/245 % de errores 7,87 Tabla 4: Desagregado de errores en la transcodifcacin verbal-arbiga DISCUSIN GA muestra difcultades en la realizacin de clculos escritos de suma y resta en diferente proporcin, y en la escritura de numerales arbigos al dictado. El anlisis cualitativo de los errores en los clculos lle- van a concluir que stos se ven alterados por inexacti- tud en las operaciones parciales que, tal como lo propo- nen Dehaene y Cohen, pueden interpretarse como una difcultad en la precisin con que se manipula la repre- sentacin semntica de un continuum numrico, lo que implica adems mayores difcultades para las operacio- nes de sustraccin que para las de adicin, como suce- de con GA. La transcodifcacin verbal-arbiga se ve afectada par- ticularmente por el agregado de ceros, y disociada de una correcta transcodifcacin arbigo-nombre del n- mero. Cohen y Dehaene aceptan la nocin de transco- difcaciones asemanticas, que no necesitan de la acti- vacin de la cantidad que implica un nmero a transco- difcar, en ellas adems, el numeral cero slo tiene valor como artefacto sintctico. McCloskey et al. Tambin consideran al cero como artefacto sintctico, aunque consideran necesaria la activacin semntica para el proceso de transcodifcacin. Un tercer modelo que se inscribe en la misma lnea es el de Power y Dal Marte- llo, aunque a diferencia del anterior ste predice la in- fuencia del cdigo verbal sobre la escritura de numera- les arbigos, y plantea dos reglas especfcas: una de ellas llamada regla de sobre-escritura que implica co- locar sobre los ceros (de centenas por ejemplo) aquello que resulte de una relacin de adicin (Ej.: /ciento cua- renta y dos/ implica que a cien se agregan o suman cua- renta y dos); la segunda es la regla de concatenacin que rige en las relaciones multiplicativas e implica el agregado de ceros (Ej.: /catorce mil/ implica que cator- ce es multiplicado por mil) por lo que deben agregrse- le o concatenarse tres ceros. Este ltimo modelo permi- te una interpretacin ms especfca de los errores de GA, ya que el porcentaje ms alto de los mismos con- siste en el agregado de ceros por dfcit en aplicacin de la regla de sobreescritura que da lugar a errores ta- les como 435002 en lugar de 43.502 o 850090 en lugar de 8.590. CONCLUSIONES El desagregar los procesos numricos desarrollados adecuadamente de aquellos no logrados en su totalidad en un caso de discalculia, corrobora la utilidad del plan- teo de un sistema modular. Las alteraciones en las sustracciones de GA muestran que su difcultad est ms ligada a las operaciones con nmeros grandes es decir aquellos que sobrepasan el uso de los dedos de una mano (Ej.: 14-3) lo que pue- de constituir una explicacin al hecho de que la presen- cia de ceros en los operandos disminuya los errores en las operaciones de sustraccin, la cantidad total a pro- cesar en cada instancia siempre ser pequea. Los procesos de transcodifcacn arbigo-verbal y ver- bal-arbigo muestran un rendimiento disociado. En el segundo, que expone un alto porcentaje de error, es po- sible explicar los mismos a travs de la difcultad espe- cfca en la utilizacin de la regla de sobre-escritura (overwritting). BIBLIOGRAFA Ardila, A. & Rosselli, M. (2002) Acalculia and dyscalculia. Neurop- sychology Review, Vol.12; Nro.4: pp 179-232. Dansilio, S. (2008). Los Trastornos del Clculo y el Procesamien- to del Nmero. Montevideo: Prensa Mdica Latinoamericana. Dehaene, S. & Cohen, L. (1995) Towards an anatomical and functional model of Number Processing. Mathematical Cognition; 1: 83-120. McCloskey, M.; Caramazza, A. (1985) Cognitive Mechanisms in Number Processing and Calculation: Evidence from Dyscalculia. Brain and Cognition 4, 171-196. McCloskey, M.; Sokol, S. M.; Goodman, R. A.; Schulman, R. A. & Caramazza, A. 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The majority of respondents perceived body feelings as being short, gradual, not in- tense and enjoyable, occurring usually in the chest area. Key words Body-image Phenomenology Cognition Body INTRODUCCIN: En los ltimos aos, el estudio de la fenomenologa de lo corporal en relacin a los procesos cognitivos ms complejos, ha resurgido como un tema de inters por parte de la comunidad cientfca (Clark, 1997; Damasio & Damasio, 2003; Gallagher, 2005; Gallagher & Zahavi, 2008; Johnson & Rohrer, 2007; Prinz, 2004, Rohrer, 2006, Varela et al., 1991). Los estudios de la conciencia, los clculos matemticos, la lgica, el lenguaje y la em- pata, entre otras funciones mentales estaran encon- trando en el abordaje de la sensorialidad desde la cog- nicin corporozada, un fecundo punto de partida (Ga- llagher, 2005; Gallagher & Zahavi, 2008). Si bien el estudio de la subjetividad o de la experiencia personal es considerado como una labor de difcil aproximacin cientfca, nuevas corrientes dentro de las ciencias cognitivas retoman la importancia de sus apor- tes. Es as que, entender el modo en el que las sensa- ciones vividas participan de los procesos cognitivos ms complejos, se concibe como un complemento de relevancia para los programas de investigacin clsicos en cognicin humana (Clark, 1999; Damasio, 2000; Da- masio & Damasio, 2003; Gallagher, 2005; Gallagher & Zahavi, 2008; Varela et al, 1991). A este respecto, el en- foque fenomenolgico de la cognicin corporizada (Va- rela et al, 1999, Varela et al., 1991) lejos de la clsica aproximacin a la naturaleza de los procesos cognitivos entendindolos como procesos abstractos, lgicos y formales, enfatiza en cambio la importancia de reparar en el estudio del experimentar humano tal como es vivi- do por sus actores, en un contexto y tiempo determina- do. Se entiende desde esta perspectiva que, para com- prender las mltiples aristas de los procesos cognitivos en general, sera necesario comprender la situacionali- dad del acto de vivir que los conforma. Se entiende des- de esta perspectiva que, la posibilidad de experimentar RESUMEN La fenomenologa inherente a nuestra condicin corpo- ral es considerada cada vez con mayor importancia en los mbitos cientfcos, distinguindosela como un ele- mento nuclear participante en la mediacin de los pro- cesos cognitivos complejos. Conocer las referencias y nodos centrales de las experiencias vividas de la ima- gen corporal fue la fnalidad de esta investigacin. Un estudio exploratorio de tipo cualitativo fue llevado a ca- bo con el objetivo de identifcar las propiedades recu- rrentes sobre la experiencia de corporeidad, segn sus dimensiones afectiva, perceptiva y conceptual. Fueron realizadas entrevistas en profundidad a una muestra no probabilstica intencional de 30 participantes de ambos sexos, argentinos, universitarios residentes en Capital Federal, entre 25 y 50 aos. El nmero muestral fue de- terminado por el criterio de saturacin de la informa- cin. Los resultados sugieren que los participantes se perciben mayoritariamente inconscientes de sus sensa- ciones corporales. Los momentos de conciliacin del sueo o despertar, as como de placer/displacer fueron referidos como situaciones de alta conciencia corporal. La mayora de los entrevistados percibe a sus sensacio- nes como siendo breves, graduales, poco intensas y agradables, ocurriendo en general en la zona pectoral. Palabras clave Imagen-corporal Fenomenologa Cognicin Cuerpo ABSTRACT EMBODIED IMAGE: AFFECT, PERCEPTIONS AND MODERN CONCEPTUALIZATIONS Body phenomenology is being reconsidered as a sub- ject of importance in scientifc felds, distinguished as a nuclear constituent in the mediation of complex cogni- tive processes. Identifying body images central node references and its subjective experiences were the pur- pose of this research. A qualitative exploratory study was conducted with the aim of identifying recurrent properties on the experience of embodiment, according to its emotional, perceptual and conceptual dimensions. A total of 30 participants between 25 and 50 years were interviewed in depth. All volunteers were Argentinean, living in Buenos Aires city, with a university degree. The sample was not probabilistic and its number was estab- lished by the criterion of data saturation. The informa- tion was analyzed qualitatively seeking to identify emerging core categories of speech. The results sug- 42 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA la corporeidad habra permitido, tanto desde un nivel f- logentico como ontogentico, la conformacin de re- des neuronales recursivas a partir de las cuales la infor- macin puede ser procesada en niveles ms complejos de anlisis (Damasio, 2000; Llins, 2003). El desarrollo de la auto-conciencia, la intersubjetividad secundaria, la regulacin emocional y la posibilidad del lenguaje por ejemplo, se hallaran en fuerte relacin con la fenome- nologa de lo corporal. El procesamiento cognitivo re- querira por tanto de informacin de tipo multimodal, abarcando mltiples dimensiones de la sensorialidad (Barsalou et al, 2003, Barsalou, et al, 2005; Barsalou et al, 2007; Barsalou, 2008; Damasio & Damasio, 2003; Gallagher, 2005; Gallagher & Zahavi, 2008; Johnson & Rohrer, 2007; Prinz, 2004, Rohrer, 2006, Varela et al., 1991). En este sentido, los estudios de la imagen corporal bus- can comprender el rol de la experiencia en el operar de los procesos cognitivos. Desde el enfoque propuesto por Gallagher (2005) la imagen corporal refere a la apariencia del cuerpo en el campo perceptual. Consiste en un complejo set de disposiciones intencionales, per- cepciones y actitudes en las que el elemento intencio- nal lo constituye el propio cuerpo, implicando una forma refexiva o auto referencial de cognicin. La imagen cor- poral estara entonces conformada por al menos tres componentes bsicos: (a) La experiencia perceptual subjetiva (b) La comprensin conceptual, implicando al saber popular y acadmico, del cuerpo en general (c) La actitud emocional del sujeto hacia su propio cuerpo. Los tres aspectos seran afectados por factores cultura- les e interpersonales relativos al contexto socio-histri- co del individuo. Implicaran una percepcin multimo- dal, abstracta y articulada del cuerpo en cuanto al pen- samiento, la atencin y la evaluacin emocional. Aludi- ran por tanto a la idea de representacin o relato del que dispone el sujeto acerca de su situacionalidad cor- poral, siendo una percepcin dinmica. La imagen cor- poral constituira el ncleo de la experiencia fenomni- ca general (Gallagher, 2005; Gallagher & Zahavi, 2008). Buscar complementar los conocimientos provenientes de la psicologa cognitiva clsica con los modelos ac- tuales que enfatizan la subjetividad y la vivencia en pri- mera persona de la corporeidad es un desafo actual dentro de las ciencias cognitivas (Chalmers, 1999; De- praz, 1999; Varela et al, 1999). En el marco de una tesis de maestra en Psicologa Cognitiva, este trabajo de in- vestigacin busc aportar conocimientos respecto al modo en el que las personas referen su propia expe- riencia corporal. Siendo que la naciente rea de estudio de la corporeidad en las ciencias cognitivas es un cam- po de estudio reciente, mayores datos que permitan for- mular hiptesis e idear marcos tericos para su aplica- cin tanto metodolgica como prctica se consideran relevantes. OBJETIVOS El objetivo principal del presente trabajo de investiga- cin consisti en identifcar categoras emergentes del discurso de los participantes respecto a la vivencia de corporeidad. Los objetivos especfcos consistieron en: Identifcar referencias recurrentes sobre las tres dimen- siones de la imagen corporal , mencionadas en la obra de Gallagher (2005): Las percepciones ms frecuentes con respecto a la vi- vencia individual de corporeidad Los afectos prevalecientes con respecto a dicha vivencia Las conceptualizaciones ms frecuentes con respecto a la misma, reconocidas como validas por los partici- pantes DISEO METODOLGICO Tipo de estudio: Exploratorio de tipo cualitativo. Participantes: Sujetos argentinos adultos de ambos sexos de entre 25 y 50 aos residentes en Capital Fede- ral con estudios universitarios completos sin antece- dentes psiquitricos ni neurolgicos. Muestra: Fue seleccionada una muestra de tipo inten- cional cuyo nmero estuvo determinado por el criterio de saturacin de la informacin. Fueron entrevistados un total de 30 participantes. Tcnica empleada en la recoleccin de datos: Se reali- zaron entrevistas en profundidad a individuos argenti- nos residentes en Capital Federal. Se tomaron como ejes de la entrevista los atributos sentidos de su corpo- reidad en relacin a la dimensin afectiva, perceptual y conceptual. Anlisis de los datos: A partir del anlisis cualitativo de las entrevistas en profundidad y en base a los objetivos especfcos planteados, pudieron identifcarse diversas categoras emergentes del discurso de las experiencias relativas a la corporeidad de los participantes (Groun- ded Theory). El proceso de anlisis de datos fue ejecu- tado a partir del mtodo de comparacin continua de la Grounded theory (Strauss & Corbin, 1998) mediante la utilizacin del software Atlas-ti. RESULTADOS A partir del anlisis cualitativo de grounded theory imple- mentado sobre el discurso de los participantes en las en- trevistas en profundidad, los mismos manifestaron que existira una percepcin de intensidad variable pero constante del propio cuerpo, la cual acompaara toda actividad, movimiento o accin cognitiva en la que los participantes estuvieran inmersos. De todas formas, si bien se concibe a las percepciones corporales como pre- sentes en todo transcurrir, los participantes tambin ex- presaron que las mismas se ubicaran, en la periferia de la experiencia diaria, de forma tenue y sutil. Las vivencias conscientes sobre el propio cuerpo, por ende, se les pre- sentan a los participantes de manera directa y otras ve- ces, las ms, de modo indirecto y metafrico. En su ma- yora, describieron a sus percepciones como de apari- cin gradual y de duracin breve en el tiempo, siendo re- ferida la zona pectoral como el rea de mayor sensibili- dad (En el pecho es donde ms siento todas las sensa- ciones). Las sensaciones adquiriran especial nfasis en 43 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA aquellas situaciones de transicin, tenue o sbita (des- pertarse-irse a dormir, cambios de temperatura: al le- vantarme, en general por las maanas, es cuando suelo tomar contacto con mis sensaciones, con cmo me sien- to; A veces el clima me hace sentir fro en las manos y fro en los pies y es como que todo el mundo pasa por ah) o situaciones de extremos fenomenolgicos carac- tersticos, (dolores, xtasis, estmulos sorpresivos: En los momentos previos a un examen). La afectividad referida en las sensaciones vividas fue predominantemente agradable y, en menor medida, neutra. Los estmulos sociales (compartir momentos con los seres queridos), gustativos (una comida sabro- sa), olfativos (perfumes particulares), visuales (paisajes de la naturaleza) y auditivos (msica) fueron menciona- dos en mayor cantidad de oportunidades como dispara- dores de afectos positivos. Los dolores, enfermedades o disgustos personales fueron, en cambio, referidos co- mo disparadores de sensaciones desagradables. Por otro lado, y en cuanto a los aspectos conceptuales- culturales puede sostenerse que, en su mayora, los participantes asuman una postura dualista-interaccio- nista. Gran nmero de los participantes entenda al cuerpo y a la mente como siendo ontolgicamente dife- rentes, ocupando lo mental una jerarqua superior, do- minando en infuencia sobre el cuerpo, si bien este lti- mo tambin sera capaz de infuir en el funcionamiento de lo mental (Las funciones mentales infuyen en el cuerpo, en mi parecer es la mente la que manda sobre el cuerpo. Tiene la direccionalidad.). El cuerpo fue refe- rido principalmente como un organismo biolgico, una mquina, un envase, o materia que contendra a la men- te, la cual fue a su vez descripta como intangible, racio- nal, al mando de la conducta (El cuerpo es una maqui- naria que hace posible que el cerebro controle algo. Es como una caja que contiene todo lo que le pasa a esa persona; Lo mental es la manifestacin del mundo es- piritual y de las ideas de las personas. Es intangible. Hace parte de lo que no es medible pero existe.). Al buscar profundizar en los signifcados asumidos, tan- to las sensaciones corporales como la descripcin con- ceptual del cuerpo fueron aludidas principalmente me- diante recursos metafricos, existiendo puntos en co- mn entre los entrevistados en cuanto a la utilizacin de referencias relativas a la liviandad o pesadez y la ma- leabilidad o rigidez implicados en su sentir (mi cuerpo es como un elstico, las manchas de aceite en las lmparas de lava, que se hacen ms gordas o ms lar- gas en tiempos breves, as sera mi cuerpo o como se siente). Los resultados de este trabajo sealan que con mayor frecuencia, las personas se percatan de sus sen- saciones corporales cuando ocurren imprevistos en sus rutinas automticas o bien cuando se suspenden res- ponsabilidades laborales o actividades intelectuales de- mandantes de recursos atencionales (Cuando no ten- go la mente ocupada, entonces suelen aparecer estas sensaciones; Cuando hay un cambio. Un factor exter- no que cambia bruscamente ah lo noto. Como pasar de un lugar clido a uno fro). En la mayora de las situa- ciones, los participantes manifestaron un dejarse ser y un transitar de manera espontnea, desestructurada, sin refexionar en lo fenomenolgico de la vivencia en detalle. Por otro lado, tambin fueron identifcadas, aun- que en menor medida, situaciones donde el sujeto es capaz de sealar puntos precisos de inicio y de fnaliza- cin de una sensacin, siendo claro su tenor afectivo as como la involucracin refexiva. Estos ltimos casos, en general, se encontraban vinculados a eventos o ro- les sociales determinados, los cuales brindaban una pauta organizadora general, por ej. participar de una ceremonia religiosa. Por otro lado, cuando las personas referen encontrarse comprometidas en sus responsa- bilidades o rutinas diarias no suelen percibir explcita- mente las performances de su cuerpo o tematizar acer- ca de sus posibilidades, manifestando poca intensidad o conciencia fenomenolgica (Las cosas rutinarias te sacan un poco de lo que est pasando, la rutina te saca mucho. La rutina te adormece y no sos tan conciente de todo). Estas sensaciones no tomaran un signifcado explcito para los participantes hasta que ocurre algn cambio o imprevisto, ya sea a travs de un dolor inespe- rado, alguna incomodidad, sensacin de fatiga, o algn exabrupto que quiebre el fuir de la rutina. Cuando la fe- nomenologa del transcurrir diario se despliega normal- mente, cuando el sujeto corporal se encuentra en sinto- na con el ambiente y los eventos se encuentran delica- damente ordenados, entonces los indicadores expe- rienciales actuaran por debajo del nivel de la concien- cia inmediata. En cuanto a las etapas vitales y su fenomenologa ca- racterstica, slo una minora de los participantes recor- daban las sensaciones corporales experimentadas du- rante la infancia. En estos casos, fueron mencionadas la sensacin de libertad, dinamismo e intentos de alcan- zar o llegar a lugares que las capacidades corporales no permitan en ese momento. Un grupo menor de par- ticipantes mencion el recuerdo de enfermedades (por ejemplo alergias) que los afectaron en esa etapa en particular. En la adolescencia, en cambio, las referen- cias apuntaron a la vivencia de extraeza ante los cam- bios corporales, el despertar de la sexualidad y el dis- frute ante las relaciones interpersonales. En relacin a la adultez se efectuaron reiteradas menciones a la asuncin de responsabilidades, la sensacin de falta de tiempo libre, el embarazo, la maternidad/paternidad (co- mo sucesos generadores de sensaciones nuevas no experimentadas con anterioridad) y los momentos de paz o tranquilidad frente a la naturaleza o el entorno. En lo que hace a la adultez media y tardia se sealaron sensaciones de desconocimiento al observarse en es- pejos y falta de congruencia entre las intenciones moto- ras y el desempeo real alcanzado. CONCLUSIONES Las sensaciones corporales hacen a la subjetividad de los seres humanos. Las experiencias fenomenolgicas, derivadas de la corporeidad, nutren el transcurrir de los quehaceres cotidianos y extraordinarios de los partici- 44 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA pantes. Esta investigacin centr su esfuerzo en diluci- dar aquellas dimensiones recurrentes, en el discurso de los participantes, relativas a experiencias vividas de la corporeidad. Fueron objetivos directrices explorar los atributos asignados a la percatacin del propio cuerpo, su modalidad de aparicin y estructura general. Los resultados sugieren que los participantes perciben sus sensaciones corporales ubicadas en la periferia de la conciencia. La mayora de los participantes entiende a lo corporal como de naturaleza diferente de lo mental. Los momentos de conciliacin del sueo o despertar, as como de placer/displacer fueron referidos como si- tuaciones de alta conciencia corporal. La mayora de los entrevistados percibe a sus sensaciones como sien- do breves, graduales, poco intensas y agradables, ocu- rriendo en general en la zona pectoral. Se espera que los resultados obtenidos permitan aportar mayor infor- macin a la naciente rea de estudio multidisciplinar, dentro de las ciencias cognitivas, en relacin a la corpo- reidad. BIBLIOGRAFA Barsalou, L.W. (2008). Grounding symbolic operations in the brains modal systems. In G.R. Semin & E.R. 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Bowlong Green-USA: Imprint Academic 45 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA ALEXIAS EN HISPANOPARLANTES: UNA REVISIN Lopez, Cynthia Valeria Facultad de Psicologa, Universidad de Buenos Aires INTRODUCCIN Con el advenimiento de la Neuropsicologa Cognitiva en los aos 70-80, el estudio de las alexias experiment un gran cambio a partir de la descripcin de nuevas formas de alteracin de la lectura en pacientes anglo y franco parlantes (alexias fonolgica, profunda y de superfcie). Estos hallazgos aportaron evidencias para los llamados modelos de doble ruta de lectura. (Newcombe y Mars- hal, 1980, Beauvois & Derousne, 1989, Coltheart, 1980, Caramazza, 1984). En la fgura 1 se pueden ob- servar las dos rutas de lectura. El principal argumento para sostener estos modelos de doble ruta fue el rendimiento contrastante en lectura de palabras y de no-palabras encontrado en la Alexia Fo- nolgica y en la Alexia de Superfcie. El patrn en la Alexia Fonolgica consiste en severas difcultades en la lectura de no-palabras y buena lectura de palabras (tan- to regulares como irregulares) mientras que en la Alexia de Superfcie se observa buena lectura de no-palabras y pobre lectura de palabras irregulares. Los modelos de doble ruta de lectura como el que se esquematiza en la Figura 1 postulan la existencia de dos rutinas para la lectura (Coltheart, 1985; Coltheart, Curtis, Atkins & Ha- ller, 1993; Patterson y Morton, 1985; Ellis 1992), una de- nominada ruta lxica que permite leer secuencias de letras familiares (palabras) y otra, denominada ruta no- lxica, a partir de la cual se pueden leer las secuencias de letras no familiares (no-palabras). A partir de una se- cuencia de letras abstractas identifcadas por el Siste- ma de Anlisis Visual, a travs de la ruta lxica se pue- da acceder a la representacin ortogrfca de palabras familiares almacenadas en el Lxico Visual de Entrada. Luego la representacin activada en el LVE selecciona y activa en el Sistema Semntico su representacin se- mntica lo que permite acceder al signifcado de la pa- labra. A partir de los rasgos semnticos de la palabra se actualiza en el Lxico Fonolgico de Salida la represen- tacin fonolgica correspondiente para su produccin subsiguiente en el habla. Por otro lado, la ruta no-lxica procesa unidades me- nores que las palabras a travs de tres componentes de procesamiento. El primer componente es la Segmenta- cin de la cadena de letras abstractas en grafemas. A partir de la obtencin de la secuencia de grafemas abs- tractos se realiza la conversin grafema-fonema apli- cando las reglas de la lengua. Como resultado se obtie- ne una secuencia de fonemas que deben ser combina- dos (blending) en patrones silbicos con un nico pro- grama articulatorio. En el marco de estos modelos, la Alexia Fonolgica se interpreta como una alteracin de la ruta no-lxica con una lectura residual que descansa en la ruta lxica, re- lativamente menos afectada; de all la aparicin de los efectos lexicales que tien el rendimiento en lectura y RESUMEN En el marco de la Neuropsicologa Cognitiva el objetivo del presente trabajo fue realizar una revisin de los tra- bajos sobre alexia en hispanohablantes con el fn de analizar si los patrones de alteracin tienen las mismas caractersticas que los cuadros de alexia fonolgica, de superfcie y profunda descriptos inicialmente en pacien- tes que lean en sistemas de escritura opacos (como el francs y el ingls). Estos sistemas poseen muchas palabras de ortografa irregular que no pueden ser le- das en voz alta por procedimientos de conversin grafe- ma-fonema y que justifcan, entre otras razones, la for- mulacin de los modelos de doble ruta de lectura. Debi- do a la transparencia del sistema de escritura del espa- ol (todas las palabras se pueden leer por procedimien- tos de conversin grafema-fonema) se ha cuestionado la existencia de los cuadros mencionados y la pertinen- cia de los modelos de doble ruta para explicarlos (Ardi- la 1991, 1998). Esta revisin aporta evidencia emprica a favor de la pertinencia de la tipologa mencionada y del poder explicativo de los modelos de doble ruta de lectura tambin para pacientes hispanohablantes. Los resultados de la revisin muestran que los cuadros alxicos descriptos en hispanohablantes son homlo- gos con los descriptos en lenguas opacas. Palabras clave Alexias Lenguas transparentes Lectura ABSTRACT SPANISH SPEAKING ALEXIA: A REVIEW In the framework of cognitive neuropsychology the aim of this study was to review the work on alexia in spanish in order to examine wether alteration patterns have the same caractheristics as phonological, surface and deep alexia initially described in patients who read in wrinting opaque systems (French and English). These systems have many irregular spelled words that cannot be read aloud by grapheme-phoneme conversion procedures and warrant, among other reasons, the formulation of the dual-rout model of reading. Due to the transparency of the spanish writing system (all words can be read by grapheme-phoneme conversion procedures) has ques- tioned the existence of the picture above mentioned and the relevance of the dual-route model aplicability (Ardila 1991, 1998).This review provide empirical evidence for the relevance of the typology mentioned and the explan- atory power of the dual-route model of reading for span- ish-speaking patients. This review show that the tables described in spanish alexic are homologous with those described in opaque language. Key words Alexias Transparent languages Reading 46 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA el patrn de error en el que predominan los errores pa- ralxicos (sustitucin de una palabra por otra relaciona- da). Los efectos lexicales mencionados son: frecuencia (los pacientes leen mejor las palabras frecuentes que las no frecuentes), imaginabilidad (mejor rendimiento con las palabras concretas que abstractas), clase (me- jor las palabras de clase abierta que las de clase cerra- da) y categora gramatical (mejor lectura de sustantivos que de verbos). Un tercer patrn descrito es la Alexia Profunda del cual Marshall y Newcombe (1973) publica- ron el primer caso. Este cuadro puede ser visto como una alexia fonolgica ms severa (Friedman, 1988, 1996) en la que los pacientes tienen enormes difculta- des con las no-palabras, prcticamente se niegan a leerlas y presentan un signo distintivo en la lectura en voz alta que son los errores denominados paralexias semnticas. Este error consiste en la sustitucin de la palabra escrita por otra relacionada semnticamente (HIERBA > campo; NENE > cuna; JUSTICIA > revolu- cin). Tambin se observan paralexias visuales, morfo- lgicas y sustitucin por funcionales (LAS > una; HAS- TA > pero; TRAS > ante). Los pacientes leen correcta- mente bastantes palabras, sobre todo sustantivos con- cretos frecuentes. Este cuadro se atribuye a una altera- cin de la lectura no lxica y lxica directa y, en conse- cuencia, los pacientes slo pueden usar la ruta lxico- semntica que tambin tiene algn problema. La Alexia de Superfcie es interpretada como una alte- racin de la ruta lxica con una lectura residual que se basa en la actividad de la ruta no-lxica, relativamente menos afectada; de all que estos pacientes no mues- tren en su lectura efectos lexicales y s sean sensibles a la longitud de los estmulos. Adems, como el acceso al signifcado en estos pacientes est mediado por la fo- nologa, muestran confusin de palabras homfonas: no pueden decidir a cual de dos palabras homfonas (que se pronuncian igual, por ej. CAZA-CASA) corres- ponde una defnicin (por ej. construccin habitable). Dentro de los sistemas de escritura alfabticos se dis- tinguen sistemas transparentes y opacos. Los siste- mas opacos, como el ingls y el francs, poseen pala- bras irregulares cuya pronunciacin no puede derivarse por reglas de conversin grafema-fonema. En el fran- cs por ejemplo, las palabras CHOCOLAT y CHOLERA se pronuncian /cokola/ y /kolera/; la misma secuencia ortogrfca CHO se pronuncia en un caso /co/ y en otro /ko/ de manera que no pueden ser pronunciadas en for- ma correcta aplicando reglas, slo el conocimiento de la palabra completa permite acceder al signifcado y la pronunciacin correctos. En los sistemas opacos la ru- ta lxica permite leer todas las palabras (regulares e irregulares) mientras que la ruta no-lxica permite leer no-palabras y palabras regulares. En los sistemas de escritura transparentes como el espaol y el italiano no hay palabras irregulares para la lectura (aunque s para la escritura) y la pronunciacin de las palabras puede derivarse por aplicacin de reglas de conversin grafema fonema. La tipologa cognitiva de las alexias se desarroll a par- tir del estudio de pacientes franceses e ingleses cuyos sistemas de escritura son alfabticos pero opacos, sin la transparencia de las correspondencias grafema fone- ma del espaol. Considerando que existen diferencias nada despreciables entre los sistemas de escritura, es pertinente la pregunta sobre el valor universal y la apli- cabilidad de los modelos duales y de la tipologa de las alexias a otras lenguas. En particular las ortografas transparentes como el espaol, el italiano o el serbo- croata estn compuestos casi enteramente por pala- bras regulares que pueden ser ledas de forma no lxi- ca de manera que un lector podra, en principio, leer un texto en voz alta sin establecer un sistema lxico (Fun- nel, 2000). En estas lenguas es difcil (italiano) o casi imposible (espaol) encontrar clases de palabras (regu- lares e irregulares) que permitan distinguir entre el uso de procedimientos lxicos y sublxicos. Por este motivo, la aplicacin del enfoque cognitivo al estudio de las alexias en espaol ha sido cuestionada por los defensores del modelo tradicional de la media- cin fonolgica obligatoria. Este modelo postula que en la lectura el sonido es previo al signifcado y que para identifcar una palabra y acceder luego a su signifcado siempre es necesario algn tipo de pronunciacin aun- que sea subvocal. En esta lnea, Ardila (1991) conside- ra que los modelos de doble ruta de lectura no son apli- cables al espaol; ya que segn sus propias palabras la lectura en espaol est siempre mediada por la fo- nologa y el lenguaje; y es incluso muy difcil fgurarse cmo leer sin fonologa. Ms an, tomando como eje el carcter transparente del sistema de escritura del espa- ol, Ardila, Rosselli & Pinzn (1989) plantean que la ar- quitectura cognitiva funcional de la lectura depende de las caractersticas propias de cada sistema de escritu- ra, lo que implicara que desde el punto de vista cogniti- vo leer en ingls (sistema de escritura opaco) y leer en espaol sern actividades cognitivas totalmente dife- rentes. A partir de estas consideraciones tericas y de la experiencia clnica directa, estos autores han pro- puesto que las paralexias semnticas, y por consiguien- te la alexia profunda seran poco frecuentes en el Espa- ol. Siguiendo esta lnea de pensamiento, estos autores realizaron un estudio de grupo con 62 pacientes afsi- cos hispanoparlantes, a los que se le tomaron tareas de lectura de letras, slabas sin sentido, no palabras y pala- bras (Ardila, Roselli y Pinzn, 1989 y Ardila 1991). Debi- do a la ausencia de paralexias semnticas entre los errores producidos por esta muestra de pacientes los autores concluyeron que este tipo de error no aparece en el espaol debido a la naturaleza fonolgica de su sistema de escritura. Sin embargo, la ausencia de este tipo de error podra deberse a difcultades metodolgi- cas en el estudio. En este punto, la poca cantidad de es- tmulos de las pruebas podran haber colaborado para que se de esta situacin. Pero an con esta lista breve de tems, existen indicios de que ambas listas fueron ledas a travs de distintos procesos. Por ejemplo, los porcentajes de error fueron menores para palabras que para no palabras y la aparicin de lexicalizaciones da 47 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA cuenta de algn tipo de infuencia lxica en la lectura. En este punto cabe sealar que, salvo el estudio de Ar- dila y colaboradores, no hay otros estudios sobre alexia en hispanohablantes que incluyan grupos de pacientes. El hecho que todas las palabras del espaol puedan ser ledas por mecanismos no-lxicos no implica necesa- riamente que deban ser ledas de esa manera y que es- ta particularidad del sistema de escritura impida el de- sarrollo de un procedimiento lxico de lectura, rpido y efciente, con acceso directo desde la ortografa a la se- mntica. Las palabras regulares del espaol, al igual que las palabras regulares e irregulares del ingls y del francs, son secuencias nicas de letras que suenan de cierta manera y tiene un signifcado particular. En teo- ra, nada impide que un lector, ingls o espaol, que se enfrente frecuentemente con las palabras, asocie las secuencias de letras con su signifcado y su forma fono- lgica y desarrolle de esta manera una rutina lxica de lectura (Valle-Arroyo, 1996). La posicin fuerte de Ardila y col. tiene la ventaja de que puede ser refutada empricamente por el hallazgo de casos de alexia en hispanohablantes que muestren una preservacin de la lectura de palabras en ausencia de habilidades de conversin grafema fonema, es decir, casos de alexia fonolgica y de alexia profunda. Por su parte, el hallazgo de pacientes hispanohablantes con alexia de superfcie no refutara la hiptesis de la lectu- ra por mediacin fonolgica, precisamente porque es- tos pacientes leen obligadamente por mediacin fono- lgica debido a que la lesin ha alterado su capacidad de lectura lxica. Sin embargo, el hallazgo de pacientes hispanohablantes con alexia de superfcie constituye una oportunidad para mostrar cuales son las conse- cuencias de la lectura por mediacin fonolgica, y para constatar si su comportamiento es idntico al del lector normal tal cual propone la hiptesis de la mediacin fo- nolgica obligatoria. OBJETIVOS Y MTODO Objetivos En el marco de la discusin sobre la aplicabilidad de los modelos de doble ruta de lectura al estudio de la alexia en espaol, los objetivos del presente trabajo fueron: 1. Realizar una bsqueda bibliogrfca dirigida a encon- trar publicaciones sobre alexia en hispanoparlantes. 2. Revisar si los trabajos hacen referencia a los patro- nes alxicos descriptos por la Neuropsicologa Cogniti- va en pacientes hispanoparlantes. 3. Analizar si la evidencia aportada por los trabajos pu- blicados permite inclinarse por la hiptesis de la media- cin fonolgica obligatoria o por el modelo de doble ru- ta, en particular, si en el espaol existe un acceso direc- to a la semntica y si la decisin lxica visual (DLV) pue- de realizarse sin mediacin fonolgica. Metodologa La metodologa empleada fue: a) realizar una bsqueda de todas las publicaciones que presentan evidencia sobre el estudio de las alexias en pacientes hispanoparlantes y de aquellas presentacio- nes a congresos a las que se pudo tener acceso y, b) hacer un anlisis crtico de las mismas sobre la base de los objetivos propuestos. Alexia Fonolgica y Profunda en pacientes hispa- noparlantes En este captulo, se analizan los casos que han sido descriptos como alexia profunda y fonolgica. Cmo se mencion anteriormente, la alexia profunda y la alexia fonolgica comparten la difcultad en la lectura de no palabras y un mejor rendimiento relativo en la lectura de palabras. Este patrn sugiere que estos pacientes utili- zan los procesos lxicos para la lectura de palabras a partir de su difcultad para la lectura no lxica. A diferencia de la alexia profunda los pacientes con alexia fonolgica no producen paralexias semnticas y no perdieron completamente la habilidad de leer no pa- labras. Por esta razn, algunos autores (Friedman 1996, 1998) sostienen que la alexia profunda son casos severos de alexia fonolgica y plantean un continum en- tre estos cuadros. Alexia Profunda Uno de los primeros casos comunicados en hispano- parlantes, fue el de LS (Dalms y Benavidez, 1991), diestro hispanoparlante, 10 aos de educacin formal, comerciante. A la edad de 41aos present en forma brusca una hemipleja derecha con afasia total. La to- mografa computada (TC) mostr una extensa rea hi- podensa fronto-temporo-parietal extendida hacia la profundidad, con los caracteres de un infarto silviano to- tal. LS poda leer el 20% de las palabras y no poda leer no palabras. LS produjo en la lectura de palabras para- lexias semnticas (25%), paralexias visuales (43%) y paralexias morfolgicas (8%). Los autores concluyeron que LS presentaba las caractersticas propias de los ca- sos descriptos como alexia profunda. En 1994 Ruiz y colaboradores publicaron dos pacientes que presentaban sntomas compatibles con alexia pro- funda. El paciente ON, diestro, de 63 aos y escolaridad universitaria, haba sufrido un infarto subocortical fron- to-parietal izquierdo extendido a la cpsula interna que le produjo una hemipleja con hipoestesia derechas y afasia. ON poda leer el 76% de las palabras y solo el 2% de las no palabras. La lectura de palabras estaba afectada por los efectos de frecuencia, clase y catego- ra gramatical e imaginabilidad. Los errores en la lectu- ra de palabras fueron morfolgicos (36%), semnticos (23%) y visuales (27%). El segundo paciente era MG de 57 aos, diestro y escolaridad universitaria quien tuvo un infarto cortico-subcortical fronto-temporo-parietal silviano izquierdo que le produjo hemipleja, hipoestesia y hemianopsia derechas y afasia. MG tena una lectura caracterizada por una pobre lectura de no palabras (8%) y mejor lectura de palabras (63%), con efecto de frecuencia, clase y categora gramatical e imaginabili- dad. Los errores que caracterizaron la lectura de MG fueron paralexias morfolgica (40%), semnticas (15%) y visuales (33%). En resumen, ON y MG presentaban 48 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA una alteracin severa de la conversin grafema-fonema evidenciando un proceso de lectura que se apoyaba en los procesos lexicales directos con produccin de para- lexias semnticas. Ferreres y Miravalles (1995) publicaron el caso de JKM, hombre diestro con doce aos de educacin y bilinge, quien tuvo un infarto isqumico temporo-parieto-tempo- ral izquierdo extenso con hemipleja derecha y afasia. JKM solo lea el 8.4% de las palabras con efecto de ca- tegora gramatical y era incapaz de resolver la tarea de lectura de no palabras. Los errores de JMK eran para- lexias verbales de las cuales el 57.3% eran semnticas, es decir, semnticamente relacionadas al blanco (por ej. Asno > burro; cultura > estatua). Por otra parte, JMK tena un 40% de aciertos en el emparejamiento palabra/ dibujo, rendimiento muy bajo para su nivel de escolari- dad pero que es mucho ms alto que el 0% en la lectu- ra de no-palabras lo que muestra que el paciente acce- da al signifcado de palabras escritas como para sea- lar el dibujo adecuado en el 40% de los emparejamien- tos mientras que no poda obtener informacin fonolgi- ca de no-palabras incluso tan pequeas como una sla- ba. Los autores concluyeron que JMK permite docu- mentar que la transparencia del sistema de escritura del espaol no impide la aparicin de pacientes alxicos que producen gran cantidad de paralexias semnticas y el resto de los sntomas que conforman el complejo sin- tomtico de la alexia profunda. En el 2001 Cuetos y Labos publican el caso de JD hom- bre diestro de 46 aos quien sufri un ACV izquierdo dos aos antes de la investigacin. JD tena una deci- sin lxica visual del 85% y su lectura de palabras era del 7.95 % con produccin de errores semnticos. Tam- bin presentaba una alteracin severa de la lectura de no palabras (0%). En la prueba de emparejamiento pa- labra dibujo tuvo un rendimiento del 92.5%. Los autores concluyeron que JD constitua un caso de alexia profun- da ya que presentaba los sntomas centrales de este desorden: incapacidad para leer no palabras y errores semnticos en la lectura. Ms recientemente, Davies y Cuetos (2005) publicaron el caso de MJ, una mujer diestra de 38 aos y educa- cin terciaria quien tuvo un tumor en los ganglios basa- les izquierdos y se le practic una biopsia producto de la cual tuvo una hemorragia cerebral. Una TC mostr una lesin en el tlamo (producto del tumor) y una le- sin en el cortex estriado (producto de la hemorragia). MJ lea el 28,5 % de las palabras y solo el 5% de las no- palabras. En la lectura de palabras produjo paralexias verbales de las cuales el 10,09 % eran paralexias se- mnticas. En la decisin lxica visual (DLV) MJ logr un 90 % de aciertos. Los autores caracterizan el patrn de lectura de MJ como un caso de alexia profunda. Estos pacientes que acabo de describir poseen un pa- trn de rendimiento compatible con la alexia profunda, en el cual se observa una severa alteracin de la ruta fonolgica de la lectura razn por la cual, deben leer empleando los mecanismos lxicos semnticos que se encuentran tambin alterados (aunque en menor medi- da) lo que posibilita la aparicin de los errores semnti- cos en la lectura de palabras. A pesar que Ardila no en- contr evidencia de paralexias semnticas en un estu- dio de grupo con pacientes hispanoparlantes, los casos revisados demuestran que, aunque el cuadro puede ser poco frecuente, tambin puede encontrarse en pacien- tes hispanohablantes. La bsqueda mostr que se han publicado 6 casos de Alexia Profunda en pacientes hispanoparlantes. Alexia Fonolgica Otro patrn alxico que muestra mayor conservacin de la ruta lxica es el de la Alexia Fonolgica y la bs- queda bibliogrfca mostr que el patrn ha sido encon- trado en el idioma espaol. Uno de los primeros estudios publicados fue el de Cue- tos, Valle Arroyo y Suarez (1996). El paciente AD, hom- bre diestro de 70 aos y de alto nivel educativo tuvo una lesin cortico-subcortical parieto-occipital isqumica iz- quierda. AD presentaba un 89.12 % de efcacia en la lectura de palabras contra un 34.75% de aciertos en la lectura de no palabras. La mayora de sus errores eran no palabras relacionadas y lexicalizaciones; y no pre- sentaba efectos de clase gramatical, imaginabilidad o frecuencia en la lectura de palabras, probablemente de- bido al alto rendimiento. AD tena una DLV del 95%. Po- da realizar tareas de segmentacin ortogrfca y fono- lgica, tena un rendimiento casi perfecto en la produc- cin del sonido de las letras pero estaba severamente alterado en su habilidad para combinar fonemas aisla- dos en un patrn articulatorio silbico. Cabe aclarar que no tena dfcit de la memoria verbal de corto plazo por lo cual la difcultad en la lectura de palabras parecera deberse a la difcultad en el proceso de ensamblaje de fonemas (blending) en la ruta fonolgica. Los autores concluyeron que AD tena sntomas compatibles con el cuadro de alexia fonolgica compatible con los modelos de doble ruta. Cabe destacar que el nico y prominente efecto de lexicalidad, se presenta en la lectura (pala- bras vs no palabras) En 1999 Iribarren, Jarema y Lecours publicaron dos ca- sos compatibles con alexia fonolgica, TRP y CPG am- bos con alto nivel de educacin. TRP mujer diestra de 66 aos quien sufri un ACV izquierdo en el territorio de la arteria cerebral media con hemiparesia derecha y afasia expresiva. TRP presentaba un 82.87 % de acier- to en la lectura de palabras con efectos de lexicalidad, clase y categora gramatical. En cambio solo poda leer el 38.33 % de las no palabras y los errores eran lexica- lizaciones (leer las no palabras como palabras por ej. maferi /familia/). Tena una DLV del 95%. El otro pacien- te era CPG, hombre zurdo de 42 aos, profesor univer- sitario y socilogo, mostr el cuadro clnico de un ACV con hemipleja izquierda pero la TC no mostr lesiones. El rendimiento de CPG en lectura de palabras fue del 48.61 % y no poda leer ninguna no palabra (0%). Al igual que TRP presentaba efecto de lexicalidad, clase y categora gramatical; y los errores en no palabras eran lexicalizaciones y no palabras lejanas. Su DLV fue del 49 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA 100%. En cuanto a la evaluacin de la ruta fonolgica, ambos tuvieron buen rendimiento en la prueba de reco- nocimiento de algrafos y de segmentacin silbica pe- ro la denominacin de letras estaba afectada en ambos pacientes, lo que fue interpretado como debido a fallas en la conversin grafema-fonema. Para los autores am- bos casos corresponden al cuadro de alexia fonolgica. Ferreres y cols publicaron dos casos ms de alexia fo- nolgica, AP (2003) y LT (2003, 2008 y 2009). El pa- ciente AP de 24 aos, 10 aos de escolaridad, diestro, sufri en septiembre de 1995 un traumatismo de crneo que le produjo hemipleja derecha y afasia. La TC mos- tr una lesin extensa contuso-hemorrgica, frontal iz- quierda cortico-subcortical. AP presentaba un 95.6 % de aciertos en la lectura de palabras cuyos errores eran paralexias visuales; y un 66.7% en lectura de no pala- bras con no palabras relacionadas como error predomi- nante. La diferencia entre estos rendimientos es signif- cativa lo que implica un efecto de lexicalidad en la lectu- ra. AP tena una DLV con 80% de aciertos mientras que en la comprensin visual de objetos tuvo un 97,5%. Am- bos resultados sugieren buen acceso directo a la se- mntica desde la ortografa. Todas las tareas que eva- lan la va perilexical tenan un buen rendimiento excep- to la combinacin de fonemas en slabas tarea en la que adems mostraba ms errores sobre vocales que con- sonantes. Estos datos sugieren a juicio de los autores que AP presentaba un cuadro de Alexia fonolgica. El paciente LT era hombre, diestro, ingeniero universita- rio. A la edad de 47 aos sufri un ACV isqumico con leve compromiso motor y sensitivo y afasia. La TC mos- tr una lesin opercular izquierda con extensin a los lbulos temporal y frontal. LT tena un rendimiento del 100% en la lectura de palabras y solo un 60 % en la lec- tura de no palabras. En la DLV el rendimiento fue del 90% y en el emparejamiento palabra escrita dibujo ob- tuvo el 100% de aciertos. Al igual que AP, LT tuvo buen rendimiento en todas las tareas perilexicales y fonolgi- cas excepto en la combinacin de fonemas (blending). Los autores concluyeron que LT reuna todas las carac- tersticas de la alexia fonolgica. El ltimo caso publicado en 2008 (Plasencia, Iglesias Do- rado y Serrano) es el de JVM hombre, diestro y con 7 aos de escolaridad. El paciente sufri un traumatismo de crneo, que le caus hemiparesia derecha y afasia. La TC mostr una imagen hipodensa en la regin parieto temporal izquierda. JVM poda leer el 58 % de las pala- bras pero no poda leer ninguna no palabra (0%). En DLV tuvo un rendimiento del 80% y su comprensin de pala- bras fue del 63% evaluada con la versin escrita del test de Pirmides y Palmeras. JVM presentaba efecto de cla- se y categora gramatical e imaginabilidad y la mayora de los errores eran paralexias visuales. En cuanto al ren- dimiento en tareas que evalan la va perilexical tena buen rendimiento de algrafos pero presentaba algunas difcultades con el sonido de las letras (72%) aunque los porcentajes ms bajos eran en lectura de slabas 65 y 30%; y difcultades mayores en la combinacin de fone- mas en slabas (blending) (10%). Segn los autores los resultados evidenciaran difcultades tanto en la conver- sin grafema-fonema como en la combinacin (blending) lo que impeda en JVM la utilizacin de la ruta fonolgica de lectura, razn por la cual presenta una sobredepen- dencia de la ruta lxica. En total la bsqueda revel la publicacin de 6 casos de Alexia Fonolgica en pacientes hispanoparlantes. La publicacin de los casos de alexia profunda y fonol- gica es compatible con la afrmacin de Valle Arroyo (1996) respecto a que la transparencia del espaol no impide el desarrollo de una ruta lxica. Sin embargo, Ar- dila (2000) revis parte de los casos de alexia profunda y los desestim como evidencia en contra de su hipte- sis de mediacin fonolgica obligatoria debido a que se trataba de sujetos altamente escolarizados, algunos multilinges, o sometidos a muchos aos de terapia. Consider que podan ser vistos como excepciones, no relevantes para comprender la lectura normal en espa- ol e insisti con la hiptesis de la mediacin fonolgica aunque matizndola con la hiptesis del entrenamiento excepcional: la lectura en espaol se realizara median- te una estrategia grafofonmica (mediacin fonolgica) y slo apareceran estrategias adicionales bajo circuns- tancias especiales, como el bilingismo o entrenamien- tos excepcionalmente altos en lectura (Ardila, 2000). Aunque Davies y Cuetos (2005) rechazan la hiptesis de Ardila y asumen que un adulto sano puede utilizar ambas rutas de lectura, parecen adherirse parcialmen- te a la hiptesis del entrenamiento excepcional cuando sostienen que los altos niveles de alfabetizacin pro- mueven el mapeo lxico directo como una ruta rpida y efciente hacia el lxico. Y vuelven a la hiptesis cuando intentan explicar la supuesta baja frecuencia de casos de alexia profunda y fonolgica en espaol; segn estos autores, estos patrones alxicos seran poco frecuentes en espaol porque se necesita la concurrencia de dos condiciones: grandes lesiones en sujetos muy escolari- zados. Aqu hay que sealar que la frecuencia relativa de los distintos tipos alxicos no se puede inferir confa- blemente de estudios de caso nico sino que resulta ne- cesario enfocar directamente el tema mediante estu- dios de poblaciones. Sin embargo, y aunque no es con- cluyente por tratarse de pocos casos, la hiptesis del entrenamiento excepcional podra refutarse a partir de los pacientes AP y JVM quienes a pesar de sus pocos aos de escolaridad presentan rendimientos acordes con el cuadro de alexia fonolgica. Hillis y Caramazza (1991, 1995) y Miceli y col (1991, 1994) aportaron una explicacin diferente a supuesta menor incidencia de errores semnticos en lectura y de casos de alexia profunda observados en el Espaol. Es- tos autores formularon la Hiptesis de la Suma segn la cual en la Alexia Profunda se encuentran alteradas am- bas rutas de lectura, pero la informacin semntica (an empobrecida por el dfcit de la ruta semntica) se su- ma a la informacin fonolgica (an empobrecida por la alteracin severa de la ruta fonolgica) aportada por la conversin grafema-fonema para producir una lectura correcta de palabras aunque la comprensin de pala- 50 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA bras y la lectura de no-palabras estn deterioradas. Mi- celi y col. (1994) sostienen adems que la complejidad del sistema de conversin est relacionada con la ocu- rrencia de errores semnticos; de manera que en siste- mas opacos como el ingls y el francs hay mayor pro- babilidad de encontrar errores semnticos en lectura y dictado que en sistemas transparentes como el espaol y el italiano. Las lenguas transparentes resultan ms protegidas de la produccin de errores semnticos en lectura y escritura debido a que los mecanismos de conversin, al ser casi siempre mapeos uno a uno, an daados, aportan aunque sea un mnimo de informa- cin fonolgica que permite restringir la produccin de errores semnticos en la salida. Alexia de Superficie Como se seal ms arriba, la Alexia de superfcie se caracteriza por una buena lectura de no palabras y de palabras regulares versus una difcultad para leer pala- bras irregulares as como la produccin de errores de regularizacin en estas ltimas (por ej. la palabra del in- gls pint pronunciarla como los vecinos ortogrfcos mint, lint, print), ya que se encuentra alterada la va lxi- co-semntica, razn por la cual la lectura debe realizar- se a travs del ruta fonolgica. La inexistencia de palabras irregulares para la lectura en espaol hace empricamente imposible encontrar errores de regularizacin que son el signo ms distinti- vo de la alexia de superfcie. Durante mucho tiempo, es- to difcult la posibilidad de poner en evidencia la exis- tencia de pacientes hispanohablantes con alexia de su- perfcie. El primer trabajo relacionado con esta cuestin fue el de Masterson, Coltheart y Meara (1985) pero el paciente estudiado era bilinge (espaol-ingls) y el trastorno no era adquirido sino del desarrollo; la dislexia de superf- cie del paciente afectaba ambas lenguas pero era ms sencillo identifcarlo en ingls que en espaol debido a que este ltimo carece de palabra irregulares. En una revisin de las alexias en espaol, Valle-Arroyo (1996) seal la difcultades metodolgica para poner en evi- dencia la alexia de superfcie en espaol por la falta de palabras irregulares debido a la transparencia del idio- ma y planteaba la necesidad de buscar otras tareas que pusieran de manifesto la sobredependencia de la ruta perilexical de lectura por alteracin de la ruta lxica. En 1996 en una publicacin breve Iribarren, Jarema y Lecours presentan el caso ITA, hombre, diestro de 67 aos con escolaridad universitaria. La paciente haba sufrido un ACV y la TC mostr un infarto en la regin temporal anterior e inferior izquierda y en el rea tempo- ro-parietal posterior con dao subcortical bilateral no severo. A ITA le tomaron tareas de lectura de palabras, no palabras y palabras con acento borrado (para reem- plazar la prueba de palabras irregulares). ITA ley co- rrectamente todas las palabras y no palabras que se le presentaron. En la prueba de lectura de palabras con acento borrado produjo errores de regularizacin (lea corazon en lugar de corazn, con acento en la a como si fuera grave y no aguda) y presentaba confusin de homfonos. No present efectos lxicos como es espe- rable en este cuadro. El uso de palabras con acento bo- rrado fue un primer intento por tratar de resolver la dif- cultad metodolgica del espaol para poner de mani- festo la lectura de los alxicos de superfcie en una len- gua transparente como es el espaol. En 2005 Ferreres, Martnez Cuitio y Olmedo publica- ron el primer estudio de caso de un trastorno adquirido de la lectura en hispanohablantes que sigue el patrn de la alexia de superfcie y sealaron las pruebas que permiten poner en evidencia la alteracin de la ruta lxi- ca y la preservacin de la ruta no-lxica de lectura. El paciente MM, diestro y universitario de 53 aos haba sufrido un traumatismo de crneo y su TC evidenci una lesin temporo-parietal izquierda. MM tena un 97.8 % de exactitud en la lectura de palabras y un 91.1 % en la lectura de no palabras con la caracterstica de em- plear el mismo tiempo de lectura en ambas pruebas, es decir, no presentaba la ventaja lxica en los tiempos de lectura tpica de los sujetos sin lesin. Esta ausencia de ventaja lxica en los tiempos de lectura sugiere que el paciente lee ambos tipos de estmulos utilizando el mis- mo mecanismo, la va fonolgica, es decir, trata a todos los estmulos como si todas fueran no palabras. MM no present ningn efecto lxico (frecuencia, imaginabili- dad, clase y categora gramatical) y los pocos errores fueron errores de acento y no palabras relacionadas. Otro tarea importante en el estudio de MM fue la deci- sin lxica visual con pseudohomfonos. La prueba consiste en decidir si un estmulo escrito es o no una palabra y los estmulos que se presentan son palabras (CAMISA), no palabras (CAMIRA) y no-palabras pseu- dohomfonas (CAMIZA). MM produjo muy pocos erro- res con las palabras (93.3% de acierto) y las no pala- bras (90% de acierto) en cambio cometi muchos erro- res con los pseudohomfonos (slo un 33.3% de res- puestas correctas). Esto se debe a que al leer por la ru- ta fonolgica acepta las no palabras pseudohomfonas como si fueran palabras debido a que suenan como una palabra, por ejemplo acepta CAMIZA como palabra porque suena igual que CAMISA (en el espaol del Ro de la Plata) Por esta misma razn, tiene difcultades en la prueba de comprensin de homfonos (43%), en la cual no puede saber a qu homfono le corresponde la defnicin ya que hace el juicio a travs del sonido (por ej. no puede determinar si construccin habitable co- rresponde a CASA o a CAZA ya que ambos se pronun- cian igual en el espaol del Ro de la Plata). En el 2007 Lpez y cols. presentaron un trabajo en el Congreso de la Sociedad Latinoamericana de Neurop- sicologa comunicando el caso de AB, mujer diestra con 14 aos de escolaridad quien haba sufrido el san- grado de una malformacin arterio venosa. La tomogra- fa computada cerebral mostr una lesin que afectaba la regin parieto-occipital posterior izquierda con exten- sin al temporal posterior. AB presentaba una lectura pareja de palabras (91%) y no palabras (78%), y mostra- ba efectos tpicos de los mecanismos no-lxicos reali- 51 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA zados por mediacin fonolgica: ausencia de diferencia P/NP, lentifcacin, silabeo, sin efectos lxicos en la lec- tura. El rendimiento en la decisin lxica con pseudoho- mfonos era bueno con las palabras (88%) y no pala- bras (90%) pero extremadamente bajo con los pseudo- homfonos (23%). Adems de estos errores falsos posi- tivos con pseudohomfonos, la paciente fallaba en la discriminacin de palabras que tienen igual sonido y distinta ortografa (homfonos) como qued de mani- festo en la prueba de comprensin de homfonos (27%). Estos resultados sugieren que la decisin lxica y el acceso a la semntica son realizadas por la pacien- te a travs de la mediacin fonolgica, sin consultar el almacn lxico ortogrfco. Los resultados obtenidos en el estudio de estos ltimos dos pacientes permiten caracterizar el patrn de rendi- miento de los alxicos de superfcie en el espaol aten- diendo a las particularidades de la lengua y empleando las pruebas adecuadas para poner de manifesto las ca- ractersticas de la lectura por mediacin fonolgica a la cual deben recurrir por encontrarse alterada la va lxi- co-semntica de la lectura. Este patrn de rendimiento se caracteriza por: ausencia de ventaja lxica en la pre- cisin y tiempo de lectura (los pacientes leen palabras y no-palabras con la misma precisin y velocidad, mien- tras que los controles muestran una mayor rapidez en la lectura de palabras), errores con los pseudohomfonos en la decisin lxica y confusin de homfonos en la ta- rea de comprensin. El patrn de Alexia de Superfcie fue encontrado en 3 casos de sujetos hispanoparlantes. DISCUSIN La bsqueda de sujetos alxicos hispanoparlantes mos- tr la existencia de un nico trabajo de grupo y 15 estu- dios de caso nico: 6 alexias profundas, 6 alexias fono- lgicas y 3 alexias de Superfcie. Los quince casos revisados en el presente trabajo muestran que es posible identifcar en hispanohablan- tes los tres tipos de alexia descriptos en lenguas opacas y que fueron utilizados como evidencia a favor de los modelos de doble ruta de lectura. La difcultad para identifcar estos patrones entre pacientes hispanoha- blantes parece entonces ms relacionada con la meto- dologa de estudio que con las particularidades de la lengua. Es posible que los estudios de grupo, que no utilizan las pruebas y estmulos adecuados, y que reali- zan las inferencias a partir de la promediacin de los re- sultados del grupo, fallen en la identifcacin de los mencionados patrones. En este punto, es importante resaltar la necesidad de llevar a cabo un estudio de gru- po en pacientes hispanoparlantes similar al hecho por Toraldo y cols (2006) con pacientes de habla italiana que, a partir de la utilizacin de las pruebas adecuadas, permita saber cual es la frecuencia de aparicin de los distintos cuadros de alexia en nuestra poblacin. Ardila (1998) defende la hiptesis de que el desarrollo de una ruta lxica de lectura en hispanoparlantes po- dra producirse en casos de exposicin excepcional- mente alta a la lectura. Si bien la mayora de los pacien- tes presentados poseen una escolaridad formal (univer- sitaria y terciaria) considerada alta aunque no excepcio- nal, dos de los casos descriptos de alexia fonolgica so- lo tienen siete y diez aos de escolaridad, lo cual refuta- ra la idea de que la ruta lxica solo se desarrolla en su- jetos altamente escolarizados y sobreexpuestos a la lectura. Por otro lado, es importante notar que entre los pacientes con alto nivel educativo se han encontrado patrones opuestos de alteracin de la lectura. Algunos utilizan la va lxico semntica para leer debido a su d- fcit en la ruta fonolgica (alexia fonolgica y alexia pro- funda) y otros se ven obligados al utilizar la ruta fonol- gica por dfcit en la va lxico semntica (alexia de su- perfcie). Esto sugiere que el patrn alxico no se debe al nivel de escolaridad sino a que la lesin afect dife- rentes componentes de la organizacin cognitiva y ce- rebral de la lectura. Dentro de los objetivos del presente trabajo estaba in- dagar si exista un acceso directo a la semntica desde la ortografa o este acceso estaba siempre mediado por la fonologa como sostienen Ardila y cols (1989, 1991). El caso MM muestra que, efectivamente, la mediacin fonolgica permite acceder al signifcado ya que el pa- ciente logra un 95% de acierto en la tarea de empareja- miento palabra escrita/dibujo, aunque previa pronuncia- cin de la palabra de manera abierta o subvocal. Pero pacientes que tienen alteraciones en la mediacin fono- lgica como LT (40% de errores en la lectura de nopala- bras) tambin muestran un buen rendimiento en la tarea de emparejamiento palabra escrita/dibujo, alcanzan el 100% de aciertos y la realizan de manera veloz. Ms an, JMK, quien tena completamente abolida la media- cin fonolgica (no lograba leer ninguna no-palabra), poda sin embargo acceder al signifcado de muchas palabras (40% de aciertos en la prueba de empareja- miento palabra escrita -dibujo). Tambin el paciente AP tena un 97.5 % de acierto en la prueba de comprensin. Todos estos pacientes tambin tienen buenos rendi- mientos en la tarea de decisin lxica visual, lo cual su- giere que accedan al conocimiento ortogrfco sin ne- cesidad apoyarse en la fonologa de la palabras. En consecuencia, tal como lo sostienen los modelos dua- les, debe postularse una va de acceso directo desde la ortografa al signifcado, no mediado por la fonologa. Una vez identifcados los patrones de alexia en pacien- tes hispanoparlantes los modelos de doble ruta no tie- nen mayores difcultades para explicar estos hallazgos en espaol ms que otras lenguas. De hecho, esta diso- ciacin es difcil de explicar si no se asume que los pro- cesos involucrados en la lectura de palabras son dife- rentes de los utilizados para leer no-palabras. Si los alxicos fonolgicos utilizaran para leer palabras y no palabras los mismos mecanismos que los alxicos de superfcie no se entiende por qu los primeros leen bien las palabras y mal las no palabras, y los segundos tie- nen un rendimiento parejo aunque lentifcado. Estos pa- trones solo pueden explicarse si interpretamos que los sujetos con alexia fonolgica leen predominantemente 52 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA a travs de la ruta lxica por dfcit de la ruta fonolgi- ca, y en cambio, los alxicos de superfcie presentan el patrn inverso, dado un dfcit en la va lxica se ven obligados al leer predominantemente por la ruta media- da por la fonologa. De hecho, segn las predicciones que se derivan de la teora de la mediacin fonolgica obligatoria todos los sujetos normales deberan com- portarse como MM y AB, es decir, deberan fallar en la decisin lxica con pseudohomfonos y en la compren- sin de homfonos, y no deberan presentar ventaja lxica en la lectura de palabras y no palabras. En este sentido la teora de la mediacin fonolgica obligatoria explicara la alexia de superfcie (en esto no se diferen- cia de la teora de la doble ruta, que tambin asume que en este tipo de alexia el paciente lee por la ruta no-lxi- ca) pero no explicara la alexia fonolgica y por sobre todas las cosas, no se sostendra como teora de la lec- tura normal. En suma, la evidencia que brindan los casos de alexias en sujetos hispanoparlantes publicados hasta el mo- mento contradice la asuncin de Ardila (Ardila 1991; Ar- dila y cols.; 1989) que leer en espaol siempre involucra la ruta mediada fonolgicamente. Por el contrario, apor- tan evidencia a favor de los modelos duales de lectura de la neuropsicologa cognitiva y su aplicabilidad a un sistema de escritura transparente como el espaol. Es- to no implica negar que las particularidades de los sis- temas de escritura tengan consecuencias en la cons- truccin de la arquitectura funcional de los procesos de lectura. Ms bien, rechazan las suposiciones de que la transparencia del espaol impedira el desarrollo de una ruta lxica de lectura y por lo tanto, la aparicin de patrones alxicos como los descriptos para lenguas opacas y aportan evidencia a favor de las explicaciones proporcionadas por los modelos duales. Esto no quiere decir que otras caractersticas del espaol, como la ri- queza de la organizacin morfolgica o el carcter pre- ponderante de la slaba, puedan infuir en la organiza- cin interna de los procesos lxicos y sublxicos res- pectivamente y de esta manera diferenciarse de otros idiomas como por ejemplo el ingls BIBLIOGRAFA Alajuanine T, Lhermitte F, et Ribaucourt-Ducarne B. Les alexias agnosiques et aphsiques. In T. Alojuanine (ed.) Les grandes Acti- vites du Lobe Occipital. Paris. Masterson. 1960. Ardila, A. (1991). Errors resembling semantic paralexias in Spa- nish-speaking ahasics. Brain and Language, 4, 437-445. Ardila A, Rossell M & Pinzon O (1989). 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New Jersey 54 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA EVALUACIN DE LA DENOMINACIN Y COMPRENSIN DE PALABRAS ABSTRACTAS Y CONCRETAS Margulis, Laura; Ferreres, Aldo Facultad de Psicologa, Universidad de Buenos Aires RESUMEN Se presentan el diseo y el estudio normativo de una prueba que evala la capacidad de denominacin y comprensin de palabras abstractas y concretas. La prueba fue creada con el objetivo de contar con una he- rramienta sensible para detectar difcultades de deno- minacin en individuos con alta escolaridad, en esta- dios incipientes de un proceso de deterioro cognitivo. Se reportan los resultados del estudio normativo reali- zado en la Ciudad de Buenos Aires, con 251 participan- tes controles, de ms de 50 aos de edad y diferentes niveles de escolaridad. Los resultados muestran un efecto signifcativo de la escolaridad, a favor de las per- sonas ms instruidas, en la capacidad de denominacin de palabras abstractas y concretas, de alta y baja fre- cuencia y en la capacidad de comprensin de palabras abstractas, de alta y baja frecuencia. Las caractersti- cas de la prueba y los resultados obtenidos en el estu- dio normativo, la convierten en una herramienta que puede ser de utilidad para detectar difcultades de de- nominacin en poblaciones patolgicas, de alta escola- ridad, con quejas de anomia y buen rendimiento en tests de denominacin de dibujos. Palabras clave Anomia Denominacin Concretud Imaginabilidad ABSTRACT NAMING AND COMPREHENSION OF ABSTRACT AND CONCRETE WORDS ASSESSESMENT This paper presents the design and the normative study of a test that assesses the naming and comprehension of concrete and abstract words. The test was created with the aim of providing a sensitive tool to detect diffculties of naming in individuals with high education, in incipient stages of a process of cognitive impairment. Results of the normative study are reported. The normative study was run in Buenos Aires, with 251 control participants of more than 50 years of age and different levels of educa- tion. The results showed a signifcant effect of education, in favor of the most educated, in the ability to name ab- stract and concrete words, of high and low frequency and the ability to understand abstract words, of high and low frequency. The characteristics of the test and the results obtained in the normative study make it a tool that can be useful to detect naming diffculties in high educated path- ological populations, with complaints of anomia and good performance on tests of picture naming. Key words Anomia Naming Concreteness Imageability Una de las propiedades semnticas de las palabras, que infuye en su procesamiento, es el carcter concre- to/abstracto de los tems. Las palabras concretas se ca- racterizan por contar con referentes sensoriales, su sig- nifcado refere a cosas tangibles que pueden experi- mentarse a travs de los sentidos, debido a lo cual pue- den originar rpidamente imgenes mentales de su contenido (poseen alta imaginabilidad). Las palabras abstractas, en cambio, no referen a objetos fsicos y en su mayora no evocan fcilmente imgenes mentales (poseen baja imaginabilidad). Las palabras abstractas referen a ideas o estados mentales, resultan ms de- pendientes de procesos lingsticos y su signifcado se encuentra muy afectado por el contexto de la oracin (Jefferies & cols., 2009). Mestres-Miss & cols. (2008) proponen que mientras que los conceptos abstractos se almacenaran con formatos proposicionales las pala- bras concretas podran estar representadas con forma- tos auditivos, visuales, tctiles y sensoriomotores. En sujetos sanos, sin patologa cerebral, se ha registra- do un rendimiento diferenciado entre ambos tipos de palabras (concretas y abstractas). Se observ procesa- miento ms rpido y ms preciso de palabras concretas (fcilmente imaginables) que abstractas (baja imagina- bilidad) en tareas semnticas y lxicas (James, 1975; Paivio, 1991; Kounios y Holcombs, 1994), y a esta ven- taja se la denomin efecto de concretud. En estudios de imgenes cerebrales funcionales, reali- zados con resonancia magntica funcional y con tomo- grafa por emisin de positrones, se han descripto acti- vaciones de regiones cerebrales diferentes para el pro- cesamiento de palabras abstractas y concretas (Mes- tres-Miss & cols., 2008; Wang & cols., 2010; Hoffman & cols., 2010). Es importante sealar que en los estudios que se reali- zan, tanto en sujetos sanos como en pacientes, la forma de operacionalizar la variable concretud-abstraccin de los tems es en relacin al grado de imaginabilidad del estmulo y que para estimar la imaginabilidad de los tems se utilizan encuestas en las que los participantes deben otorgar a cada palabra un valor, dentro de una escala que va de 1 a 7, donde 1 es el menor grado de imaginabilidad y 7 el mayor. Un ejemplo de este tipo de trabajos es el diccionario de Normas de imaginabili- dad (Valle Arroyo, 1998). En pacientes con distintas condiciones clnicas tambin se ha registrado un efecto de concretud, que en la pato- loga debe ser entendido como una conservacin relati- va del procesamiento de palabras concretas (menos errores) respecto de las abstractas (ms errores). En pacientes afsicos se ha encontrado efecto de con- 55 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA cretud en tareas de lectura, escritura, y comprensin de palabras (Caramazza, 1988; Nickels & Howard, 1995, Shapiro & cols., 2000). En pacientes con deterioro cognitivo hay an cierta con- troversia pero, en general, se reconoce que la variable afecta el rendimiento. En pacientes con enfermedad de Alzheimer las difcul- tades de denominacin y el dfcit semntico forman parte, junto con las difcultades de memoria episdica, de los sntomas ms frecuentes en las etapas iniciales e intermedias de la enfermedad (Alberca & Lpez Pousa, 2002). Respecto del procesamiento semntico, Rissenberg & Glanzer (1987) han descripto mayores di- fcultades para la evocacin de palabras abstractas que concretas en pacientes con enfermedad de Alzheimer. El aspecto ms controvertido se relaciona con algunos resultados en el estudio de pacientes con demencia se- mntica ya que se ha descripto un efecto de concretud inverso (peor procesamiento de palabras concretas que abstractas) (Breedin & cols., 1994; Yi & cols., 2007; Bonner & cols.,2009). Sin embargo, Jefferies & cols. (2009) encontraron mejor rendimiento con tems ms imaginables en una serie de once pacientes con de- mencia semntica. Los autores explican que los traba- jos previos en los que se describa el efecto inverso, re- portaban estudios de caso aislado, y que ese patrn in- verso no sera la norma en pacientes con demencia se- mntica. Una situacin particular la plantea el cuadro de Deterio- ro Cognitivo Mnimo, cuyos criterios diagnsticos (Pe- tersen, 1995; Gauthier, 2006) indican que el paciente debe presentar queja de memoria, preferentemente co- rroborada por un informante, documentada por evalua- cin neuropsicolgica, con buen rendimiento en los otros dominios cognitivos, y sin impacto en el desempe- o cotidiano. Sin embargo, algunos de los pacientes presentan rendimiento disminuido en los tests de deno- minacin de dibujos. Petersen (1995) explica que este rendimiento puede indicar o bien un dfcit temprano en el procesamiento lingstico, que afecta a la denomina- cin, o bien tratarse de una manifestacin de un dfcit de memoria semntica. Si la hiptesis del origen se- mntico de las difcultades de denominacin en los pa- cientes con deterioro cognitivo mnimo fuera cierta, los pacientes deberan mostrar mayor difcultad con la de- nominacin de palabras abstractas y, adems, deberan mostrar un dfcit simtrico en la comprensin de esas palabras, ya que tanto la tarea de denominacin como la de comprensin requieren la integridad de las repre- sentaciones semnticas. En esta lnea de razonamiento tambin resulta plausible la hiptesis de que el dfcit en denominacin de pala- bras abstractas podra ser detectado antes que el de palabras concretas, teniendo en cuenta que las pala- bras concretas se procesan con ms facilidad que las abstractas, segn indican los hallazgos de efecto de concretud (ventaja de procesamiento para palabras concretas respecto de las abstractas) en sujetos norma- les y en pacientes con patologa cerebral. Siguiendo con el razonamiento previo, otro aspecto que tiene importante inters clnico se centra en la hiptesis de que, si se utilizan palabras concretas en las tareas de denominacin (como en la denominacin de dibu- jos), algunos pacientes podran mostrar buen rendi- miento pero no debido a la ausencia de patologa sino debido al sesgo impuesto por la eleccin de los tems, lo que podra constituir casos falsos negativos. En otras palabras, que a pesar de mostrar un buen desem- peo en esa tarea, el sujeto podra tener difcultades. En efecto, en las exploraciones para detectar deterioro cognitivo, muchos pacientes rinden dentro de la norma en la tarea de denominacin. Es importante sealar que la tarea de denominacin ms utilizada es la denomina- cin de dibujos que, por su propia naturaleza, incluye slo nombres concretos y excluye a los abstractos debi- do a que stos ltimos no son dibujables. Hay un subgrupo de pacientes que podra constituirse con mayor frecuencia como casos falsos negativos, segn su rendimiento en la tarea de denominacin, y es el grupo de pacientes con alto rendimiento cognitivo previo. Este problema se relaciona con el concepto de reserva cognitiva (Stern, 2002) que hace referencia a las diferencias interindividuales en cuanto a la cantidad de neuronas y conexiones neuronales disponibles y a la cantidad de redes cerebrales establecidas (probable sustrato biolgico de la variabilidad en la reserva cogni- tiva). Volviendo al tema de inters, es posible suponer que la tarea de denominacin podra ser ms sensible, y por lo tanto ms apropiada para individuos con alta re- serva cognitiva, si incluyera la denominacin de pala- bras abstractas. Problema y propuesta Establecida la importancia clnica y terica de la inclu- sin de palabras abstractas en la evaluacin, el proble- ma que surge inmediatamente es el de la difcultad pa- ra incorporarlas en las tareas de denominacin de dibu- jos y comprensin por emparejamiento dibujo - palabra debido a que no son palabras dibujables. La capacidad de denominacin se evala tradicional- mente con tests de denominacin por confrontacin (di- bujos u objetos), que por su naturaleza slo incluyen pa- labras concretas. Ejemplos de este tipo de evaluacin son el Test de Denominacin de Boston (Allegri & cols., 1997), la tarea de Denominacin del ADAS (Mangone & cols., 1995), las tareas de denominacin de la BADA (Ferreres & cols., 1998), as como pruebas incluidas en otras bateras para evaluar afasia. Existen tambin un conjunto de pruebas que pueden valorar el procesamiento semntico sin la exigencia de acceder y pronunciar la forma lxica. Es el caso del Test de Pirmides y Palmeras (Howard & Patterson, 1992), en el que el evaluado debe emparejar dibujos o pala- bras, o una combinacin de ambos, de acuerdo con su contenido semntico. Nuevamente la utilizacin de di- bujos impone el sesgo que lleva a evaluar slo el signi- fcado de palabras concretas. Existen pruebas que controlan la variable imaginabili- 56 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA dad en sus estmulos, de manera que incluyen tanto pa- labras concretas como abstractas. Entre esas pruebas se encuentran los Juicios de Sinonimia (EPLA, Kay & cols., 1995) y los juicios semnticos (MEC, Ferreres & cols., 2007) que se utilizan para evaluar el procesa- miento semntico. Existen asimismo pruebas de lectura y dictado que incluyen palabras concretas y abstractas (EPLA, BADA). Sin embargo, ninguna de las pruebas mencionadas evala la recuperacin de la forma fono- lgica de las palabras abstractas. A partir de la revisin de las pruebas existentes y de constatar la relevancia clnica y terica de contar con pruebas para evaluar el procesamiento de palabras abstractas surge la propuesta de disear una prueba de denominacin y comprensin de palabras abstractas, motivo del presente trabajo. Objetivos Los objetivos del presente trabajo fueron: 1) Disear una prueba para evaluar la capacidad de de- nominacin y comprensin de palabras abstractas y concretas. 2) Realizar un estudio normativo en una muestra de participantes sin patologa cerebral, mayores de 50 aos de edad. Hiptesis Debido a que slo se estudiaron muestras de partici- pantes sin lesin cerebral las nicas hiptesis se refe- ren a variables relativas a los sujetos controles (sexo, edad, escolaridad) y a las variables independientes controladas en los estmulos: 1. Los individuos con mayor nivel de escolaridad mos- trarn rendimientos signifcativamente mejores que los individuos con menor nivel de escolaridad en las dos ta- reas de la Prueba de denominacin y comprensin de palabras abstractas y concretas. 2. No se encontrarn diferencias signifcativas de rendi- miento segn el sexo de los participantes. 3. No se encontrarn diferencias signifcativas de rendi- miento segn la edad de los participantes, dado que en el estudio normativo, se incluir slo una muestra de su- jetos de ms de 50 aos, divididos en tres rangos. 4. Se observar un mejor rendimiento en estmulos con- cretos y frecuentes. Instrumento Con el objetivo de desarrollar una prueba para evaluar la capacidad de denominacin de palabras abstractas y concretas, y teniendo en cuenta que no se puede recurrir a dibujos u objetos como estmulos, se decidi, en cola- boracin con la Dra. Virginia Jaichenco, disear una prueba de denominacin a partir de la defnicin y una de apareamiento defnicin-palabra. La misma se denomina Prueba de denominacin y comprensin de palabras abstractas y concretas, y consta de dos tareas: A) Denominacin a partir de una defnicin B) Comprensin por emparejamiento defnicin-palabra. La inclusin de estas dos tareas se debe al hecho de que si un paciente muestra bajo rendimiento en la pri- mera con buen rendimiento en la segunda, pueden sos- pecharse difcultades en la evocacin lxica, que com- prometen la capacidad de denominacin, pero conser- vacin de la representacin semntica, que permite la comprensin. En tanto, resultados pobres en ambas tareas, indicaran degradacin de las representaciones semnticas o au- sencia de ellas (por desconocimiento del tem, por ejemplo en sujetos de baja escolaridad). Es poco esperable el patrn inverso, es decir bajo resul- tado en la prueba de comprensin, con buen resultado en la de denominacin, debido a que la naturaleza de la prueba implica necesariamente la activacin de la repre- sentacin semntica para poder acceder a la forma lxi- ca. Por lo tanto, de encontrarse afectada esa representa- cin, ambas tareas deberan verse comprometidas. A) Denominacin a partir de una definicin Corpus de estmulos: Se seleccionaron 32 sustantivos blanco. Las variables controladas fueron la concretud y la frecuencia con lo que quedaron conformados cuatro grupos: AA (alta imaginabilidad, alta frecuencia); AB (alta imaginabili- dad, baja frecuencia); BA (baja imaginabilidad, alta fre- cuencia) BB (baja imaginabilidad, baja frecuencia). Se consider de alta imaginabilidad (concretos) a aque- llos sustantivos de ms de 6 puntos segn el dicciona- rio de Normas de Imaginabilidad (Valle Arroyo, 1998). Se consider de baja imaginabilidad (abstractos) a aquellos sustantivos de menos de 5 puntos segn el diccionario de Normas de Imaginabilidad (Valle Arro- yo, 1998). Se consider como de alta frecuencia a los sustantivos con valores de ms de 100 por 1,5 millones segn el LEXESP (Sebastin Galles, N. & cols., 2000). Se consider como de baja frecuencia a los sustantivos con valores de menos de 50 por 1,5 millones, segn el LEXESP (Sebastin Galls, N. & cols., 2000). Para elaborar las defniciones de los 32 sustantivos se- leccionados se buscaron las que fguran en el Diccio- nario de la Real Academia Espaola y se realizaron modifcaciones en la redaccin de las mismas a los efectos de equilibrar la complejidad semntica y sintc- tica de las defniciones. Ejemplos de los tems: AA) Palabra concreta de alta frecuencia Definicin: Mueble compuesto por una o varias tablas li- sas, sostenidas por uno o varios pies, que sirve para co- mer, u otros usos Blanco: Mesa AB) Palabra concreta de baja frecuencia Definicin: Ave rapaz nocturna, con plumaje muy suave, cabeza redonda, pico corto y encorvado, ojos grandes y brillantes Blanco: Lechuza BA) Palabra abstracta de alta frecuencia Definicin: Capacidad para mover una cosa que tenga peso o haga resistencia 57 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA Blanco: Fuerza BB) Palabra abstracta de baja frecuencia Definicin: Nmero que contiene a otro varias veces exactamente Blanco: Mltiplo Administracin: Las defniciones se presentaron de a una, en forma oral y escrita, simultneamente, y se peda al sujeto que de- nominara la palabra a la que se refera la defnicin. B) Emparejamiento definicin-palabra (comprensin) Corpus de estmulos: Se utilizaron las mismas 32 defniciones de la tarea de denominacin, acompaados por 4 opciones de res- puesta escritas (blanco, distractor abstracto, distractor concreto, distractor no relacionado-abstracto en el caso de blanco concreto y concreto en caso de blanco abs- tracto-). Las opciones se presentaron en un orden pseu- do aleatorio para evitar que la opcin correcta ocupara siempre la misma posicin en la lista de opciones. Ejemplos de los tems: AA) Palabra concreta, alta frecuencia Definicin: Mueble compuesto por una o varias tablas li- sas, sostenidas por uno o varios pies, que sirve para co- mer, u otros usos Opciones: Mesa, Sinceridad, Adorno, Escritorio AB) Palabra concreta, baja frecuencia Definicin: Ave rapaz nocturna, con plumaje muy suave, cabeza redonda, pico corto y encorvado, ojos grandes y brillantes Opciones: Silencio, Lechuza, guila, Ganancia BA) Palabra abstracta, alta frecuencia Definicin: Capacidad para mover una cosa que tenga peso o haga resistencia Opciones: Silla, Potencia, Fuerza, Msculo BB) Palabra abstracta, baja frecuencia Definicin: Nmero que contiene a otro varias veces exactamente Opciones: Mantel, Mltiplo, Ecuacin, Calculadora Administracin Se presentaron las defniciones de a una, en forma oral y escrita, simultneamente, en conjunto con las 4 opcio- nes de respuesta, y se pidi al sujeto que sealara y/o dijera cul de las opciones era la que corresponda a la defnicin. Anlisis de datos A partir de la puntuacin de los tems se calcul para cada sujeto la puntuacin total de la prueba y los subto- tales para las variables controladas (subtotal para alta y baja imaginabilidad y para alta y baja frecuencia). A partir de las puntuaciones de los sujeto se calcularon los estadsticos descriptivos para cada grupo de edad, sexo y escolaridad. Se estudiaron diferencias de rendimiento entre grupos de sujetos segn las variables demogrfcas (edad, sexo, escolaridad). Se testearon estas diferencias con pruebas paramtricas cuando se cumplieron los crite- rios de normalidad y homocedasticidad, y no paramtri- cas en caso contrario. Se estudiaron diferencias de rendimiento correspon- dientes a las variables independientes controladas (fre- cuencia, imaginabilidad). Se testearon estas diferencias con pruebas paramtricas cuando se cumplieron los criterios de normalidad y homocedasticidad, y no para- mtricas en caso contrario. Muestra Se administraron las dos tareas (Denominacin y Com- prensin) a una muestra de 251 participantes controles normales (71% de mujeres y 29% de hombres), mayo- res de 50 aos, distribuidos en tres rangos de edad (41% de 50 a 59 aos; 33% de 60 a 69 aos y 26% de 70 aos o ms) y tres niveles de escolaridad (39% con 9 a 12, 30% con 13 a 16 y 31% con 17 aos o ms de es- colaridad formal). Quedaron as conformados 9 grupos para la realizacin de los anlisis. Los participantes fueron seleccionados intencionalmen- te segn los datos demogrfcos requeridos, y se esta- bleci como criterio de inclusin que los participantes no presentaran antecedentes de patologas neurolgi- cas ni psiquitricas. Los participantes frmaron un con- sentimiento informado segn el cual aceptaban volunta- riamente realizar la tarea, en conocimiento de que no recibiran nada a cambio. Resultados Efectos de variables demogrficas sobre el rendimiento No se encontraron diferencias signifcativas de rendi- miento por sexo ni por edad, en ninguna de las dos ta- reas pero s por escolaridad; el rendimiento en denomi- nacin fue mejor en los sujetos con mayor escolaridad y una prueba de ANOVA de una va mostr que las dife- rencias eran signifcativas tanto para la tarea de deno- minacin (F aosdeescolaridad =37.359; gl 2; p=0.00) como en la de comprensin (F aosdeescolaridad =17.688; gl 2; p=0.00). La tabla 1 muestra las normas obtenidas en la muestra estudiada, segn edad y escolaridad. 58 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA Tabla 1. Normas de rendimiento en las tareas de Denominacin y Comprensin, segn la edad y la escolaridad.
DENOMINACIN COMPRENSIN Edad Escolaridad N Media Desvo est. Media Desvo est. 50 a 59 9 a 12 33 21,76 4,01 29,61 1,75 13 a 16 31 25,29 3,67 31,19 1,47 + de 17 39 26,26 3,48 31,38 1,02 60 a 69 9 a 12 33 21,45 3,27 30,55 1,79 13 a 16 27 25,63 3,31 31,33 1,14 + de 17 24 25,67 4,18 31,13 1,30 + de 70 9 a 12 31 20,71 4,22 29,48 2,34 13 a 16 17 24,35 4,88 30,82 1,88 + de 17 16 26,88 4,95 30,94 1,12
Total 251 24,02 4,44 30,69 1,73 Estudios futuros 1. Los resultados alientan a completar los estudios de validez, sensibilidad y especifcidad de la prueba, no cu- biertos en la presente investigacin. 2. Dentro de los estudios de validez sera necesario in- cluir estudios con poblaciones patolgicas para deter- minar la utilidad del test en el proceso diagnstico. 3. Ampliar el estudio a otras franjas etarias. Efecto de variables independientes sobre el rendimiento: 1) El rendimiento en los tems de alta imaginabilidad fue superior al de los tems de baja imaginabilidad y una prueba U de Mann-Whitney mostr que la diferencia era signifcativa tanto en la tarea de denominacin (Z=- 13.625; p=0.000), como en la de comprensin (Z=- 9.106; p=0.000). En la tarea de denominacin el rendi- miento fue algo mayor en los tems de alta frecuencia que en los de baja frecuencia pero una prueba U de Mann-Whitney mostr que la diferencia slo result marginalmente signifcativa (Z=-1.876; p=0.061). En la prueba de comprensin, se observ un efecto invertido de la frecuencia, con mejor rendimiento en los tems menos frecuentes (Prueba U de Mann-Whitney: Z=- 2.669; p=0.008). Conclusiones 1) La ausencia de efecto de la edad sobre el rendimien- to debe analizarse teniendo en cuenta que en este tra- bajo se evaluaron solamente personas mayores de 50 aos. Es posible que la ampliacin del estudio con suje- tos ms jvenes, muestre diferencias de rendimiento en distintos grupos etarios. 2) Los resultados muestran que las dos tareas de la Prueba de Denominacin y Comprensin de Palabras Abstractas y Concretas estn fuertemente infuidas por la variable escolaridad, inherente a los sujetos de la muestra y por la variable independiente imaginabilidad, inherente a los tems de las pruebas. Estos atributos lo hacen un test potencialmente til para el diagnstico precoz de difcultades de evocacin lxica en sujetos de alta escolaridad con quejas subjetivas de anomia y buen rendimiento en la denominacin de dibujos. 3) Por otra parte, la estructura de la prueba permite eva- luar el rendimiento diferencial de un sujeto en denomi- nacin y en comprensin de palabras abstractas y con- cretas. Este atributo lo hace potencialmente til para medir si el funcionamiento lxico-semntico de un suje- to est dentro de las normas de acuerdo a su escolari- dad y edad. 59 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA BIBLIOGRAFA Alberca, R. & Lpez Pousa, S. 2002. Enfermedad de Alzheimer y otras demencias. 2 edicin. Madrid: Editoral Panamericana. Allegri, R., Mangone, C., Fernndez Villavicencio, A., Rymberg, S., Taragano, F., & Baumann, D. 1997. Spanish Boston namimg test norms. The Clinical Neuropsychologist, 11(4): 416-420. 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(1993) cuyas repercusiones derivaron en numerosas in- vestigaciones que replicaron el estudio original con re- sultados que en ocasiones confrmaron el Efecto Mo- zart (Rideout & Taylor, 1997; Wilson & Brown, 1997; Ri- deout, Dougherty & Wenert, 1998; Hetland, 2000) mien- tras que en otras no (Stough, Kerkin, Bates & Mangan, 1994; Newman, Rosenbach, Burns, Latimer, Matocha & Rosenthal, 1995; Steele, Bass & Crook, 1999; McCut- cheon, 2000; McKelvie & Low, 2002). Paralelamente, las repercusiones del estudio original die- ron paso a la aparicin de afrmaciones y especulacio- nes, algunas de ellas alejadas de toda base cientfca, en torno a los efectos de la msica sobre la inteligencia. As, por ejemplo, en 1998 el gobernador del estado norte- americano de Georgia, Zell Miller, considerando que na- die pone en duda que escuchar msica a edades tem- pranas afecta al razonamiento temporal y espacial que subyace bajo las matemticas, la ingeniera e incluso el ajedrez (Sack, 1998, pp A12) puso en marcha un proyec- to para regalar msica clsica a todos los recin nacidos en su Estado. Al mismo tiempo, el mercado discogrfco comenz con la venta de Music for the Mozart Effect - Strengthen the Mind, que encabez durante largo tiem- po las listas de msica clsica. Posteriormente, Bangerter y Heath (2004) estudiaron en los medios de comunicacin la idea, fundamentada en los estudios precedentes, que la exposicin a la msica clsica, especialmente la msica de Mozart, mejoraba la inteligencia. A travs de un anlisis de los medios de co- municacin y de peridicos se preguntaron por cun exi- toso resultaba el efecto Mozart respecto a otros artculos cientfcos, y cmo el inters de dicho efecto haba evolu- cionado en el tiempo. En este estudio se concluy que el efecto Mozart se haba constituido como una de las tan- tas leyendas cientfcas en la medida en que estas son creencias extendidas derivadas de la ciencia que se han difundido y establecido en la cultura. En el mbito cientfco, las investigaciones centraron su atencin sobre el efecto Mozart en el cerebro y el pro- cesamiento de la msica en los hemisferios cerebrales. Los estudios de Shaw y Bodner (1999), que emplearon imgenes de la actividad del cerebro obtenidas por re- sonancia magntica en respuesta a tres tipos de msi- ca (entre la que se encontraba Mozart por supuesto), y los de Huges y Fino (2001), quienes sometieron un am- plio rango de msica al anlisis por ordenador (Mozart, Bach, Chopin y otros 55 compositores), son concluyen- RESUMEN En los ltimos aos el Efecto Mozart ha recibido consi- derable inters en el mbito de la investigacin cientf- ca. Sin embargo, los resultados obtenidos hasta el mo- mento no son consistentes. El presente estudio se de- sarroll con el objetivo de evaluar experimentalmente la existencia del Efecto Mozart mediante un diseo expe- rimental 2x2 con grupos de msicos y no msicos, in- cluyendo medidas de pretest y postest. Los resultados del ANCOVA mostraron diferencias estadsticamente signifcativas en el rendimiento de msicos y no msi- cos en una prueba de razonamiento espacial luego de haber sido expuestos a la msica de Mozart (F = 4,353; p< 0.05). Estos resultados se mantuvieron incluso des- pus de controlar las emociones (F = 0,007; p>0.05). En conjunto, los resultados obtenidos confrman la hipte- sis de la existencia del efecto Mozart en personas sin instruccin musical. Se presentan algunas hiptesis ex- plicativas sobre este fenmeno y los alcances resultan- tes del presente estudio. Palabras clave Efecto Mozart Inteligencia espacial ABSTRACT MOZART EFFECT EVALUATION IN MUSICIANS OF THE BANDA SINFNICA DE CRDOBA In recent years, the Mozart Effect has received consid- erable interest in the feld of scientifc research. Howev- er, the results obtained have been inconsistent across investigations. The present study was conducted to ex- amine experimentally the Mozart effect using a 2x2 ex- perimental design, including musician and non musician participants. In order to control for potential confounded variables, we applied pretest and posttest measures. The ANCOVA results showed signifcant differences be- tween musician and non musician participants exposed to Mozart condition in a spatial reasoning test (F = 4,353; p< 0.05). These results remained even after con- trolling emotions (F = 0,007; p> 0.05). Taken together, these results confrm the hypothesis of the existence of the Mozart Effect in people without musical training. Ex- planatory hypothesis on this phenomenon and the re- sulting scope of this study are presented. Key words Mozart effect Spatial intelligence 61 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA tes en cuanto a que el efecto Mozart, cuya base es el estmulo de funciones cerebrales superiores, se produ- ce debido a los ritmos, melodas y frecuencias altas y agudas de su msica. Siendo sonidos altamente arm- nicos que estimularan tanto el neocortex como el siste- ma lmbico, las zonas asociadas a la emocin y aque- llas reas del cerebro vinculadas en la coordinacin motora fna (la visin y otros procesos del pensamiento) de manera que no slo activaran las redes neuronales, sino que tambin tendran incidencia en la concentra- cin, la atencin y la memoria, fundamentales para el proceso del aprendizaje y con destacado papel en el ra- zonamiento espacio temporal. En defnitiva, el Efecto Mozart se asentara sobre la hi- ptesis que establece una relacin entre la activacin de las mismas regiones del hemisferio cerebral dere- cho, en el que tambin estara involucrado el razona- miento espacial, y la exposicin a la msica de compo- sicin compleja. Esta hiptesis dio origen al estudio de Douglas y Bilkey (2007), quienes encontraron evidencia convergente entre la relacin del tejido cortical involu- crado en la discriminacin del tono musical y el emplea- do para la construccin y manipulacin de representa- ciones espaciales. En ese estudio observaron que pa- cientes con amusia tuvieron un rendimiento signifcati- vamente menor al de un grupo control sano en una prueba de rotacin mental. Por otra parte, se ha encontrado evidencia de que aun- que la habilidad musical se halla localizada en el hemis- ferio no dominante, en la medida que se intensifque el aprendizaje musical formal, la participacin del razona- miento lingstico y lgico-matemtico se har ms in- tensa, implicando al hemisferio dominante en el proce- so de creacin, ejecucin o audicin de una obra musi- cal. La habilidad para percibir y criticar las interpretacio- nes musicales parecera apoyarse entonces en las es- tructuras del hemisferio derecho, mientras que en indi- viduos con preparacin musical, existiran efectos cre- cientes al hemisferio izquierdo, y decrecientes al dere- cho (Jourdain, 1998; Peretz & Zatorre, 2005). Debido a las razones expuestas el efecto Mozart se vera de al- guna manera limitado en msicos, y esto podra eviden- ciarse en una prueba de razonamiento espacial. Como antecedente al presente trabajo, Scott et al. (2010) estudiaron el efecto Mozart en msicos compa- rando el rendimiento de estos con los de un grupo con- trol en una prueba de rotacin mental luego de haber si- do expuestos a la Sonata K.448 y a un lapso similar de tiempo en silencio. Los resultados revelaron que la m- sica de Mozart incrementaba el rendimiento de no-m- sicos en una prueba de rotacin mental, mientras que en msicos no se pudo constatar dicho aumento en la funcin cognitiva de rotacin mental. Hiptesis 1. Se encontrarn diferencias signifcativas en el rendi- miento en la prueba de razonamiento espacial entre los grupos de msicos y no msicos que han sido expues- tos a la msica de Mozart. 2. No se encontrarn diferencias signifcativas en el ren- dimiento en la prueba de razonamiento espacial entre el grupo de msicos de la Banda Sinfnica de la Provincia de Crdoba que ha sido expuesto a la sonata K448 de Mozart y el grupo de msicos que no recibi tratamien- to (control). Participantes, Materiales e Instrumentos Participaron 56 sujetos de ambos sexos (varones= 76,8%; mujeres= 23,2%) con edades comprendidas en- tre los 19 y los 66 aos de edad. De ellos, 30 fueron m- sicos profesionales pertenecientes a la Orquesta Sinf- nica de la Ciudad de Crdoba, en tanto que los restan- tes participantes fueron no-msicos. Todos los sujetos fueron seleccionados mediante un muestreo no aleato- rio de tipo accidental (Grasso, 1999). Para el desarrollo del estudio, se emplearon 17 compu- tadoras e igual cantidad de auriculares Philips SPH 1900. Adems, considerando los objetivos e hiptesis de la presente investigacin, se utiliz la Sonata para dos pianos en Re mayor K448 de W. A. Mozart. Se edi- t el primer movimiento (Allegro) en su duracin para adaptarlo a los diez minutos de exposicin necesaria crendose un loop mientras que para el grupo control se cre una pista de silencio de diez minutos de dura- cin. Finalmente las pistas fueron grabadas en formato mp3 en un bitrate (kbps) 128 para su reproduccin en soporte informtico. Por ltimo, los instrumentos em- pleados fueron: Test prctico de razonamiento espacial (Newton & Bris- toll, 2009). Se trata de una prueba no verbal que contie- ne 44 tems para evaluar la capacidad para establecer relaciones de tamao, distancia, direccin, forma y ma- nejo simblico de fguras en el espacio mediante la ma- nipulacin mental de objetos tridimensionales. Escala de Afecto Positivo y Negativo, PANAS (Medra- no, Ros, Curarello, Gonzlez & Flores Kanter, 2011). Se trata de una escala compuesta por 20 tems con un for- mato de respuesta Likert de 5 opciones (desde 1= muy poco o nada; hasta 5 = siempre o casi siempre) que describen distintos sentimientos y emociones tanto po- sitivas (p.e., Interesado, Entusiasmado, Orgulloso) como negativas (p.e., Disgustado, Afigido, Culpa- ble), donde se le solicita al evaluado que indique en qu medida experimenta cada una de las emociones presentadas, utilizando para ello la escala de respuesta sealada. La inclusin de esta escala en el presente es- tudio se debe a la infuencia, documentado en investiga- ciones previas (Drake, 1998; Steele, 2000; Thompson, 2001), de la experiencia musical sobre las emociones, las cuales han demostrado una fuerte asociacin con el rendimiento en pruebas de inteligencia. Considerando esto, la evaluacin de las emociones antes y despus de la aplicacin de las distintas condiciones de msica (Mozart vs control) permite observar si se han produci- do cambios signifcativos en el estado emocional de los sujetos y analizar de esta manera en qu medida las emociones pueden estar condicionando los resultados observados. Cuestionario socio-demogrfico. A los fnes de obtener 62 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA datos adicionales de inters para la investigacin, se di- se y aplic un cuestionario en el que se les solicit a los participantes informacin relativa a la edad, sexo, tiempo de instruccin musical, edad de inicio en la acti- vidad musical, instrumento que ejecuta y lateralidad (Diestro/Zurdo). Procedimiento y anlisis de datos La presente investigacin se enmarca dentro de los es- tudios empricos cuantitativos (Montero & Len, 2007). Se utiliz un diseo experimental factorial completo (op. cit., 2007) de 2x2. En efecto, se tuvieron en cuenta 2 va- riables independientes con dos niveles cada una: la pro- fesin de los participantes (msicos vs. no msicos) y la exposicin a la Sonata de Mozart (condicin Mozart vs. Condicin control). De esta manera, se crearon 4 gru- pos de sujetos distintos. Cabe sealar que los msicos fueron asignados aleatoriamente a las distintas condi- ciones experimentales (Mozart vs control). El mismo procedimiento se repiti con los participantes no msi- cos, conformndose de esta manera cuatro grupos de investigacin (Tabla 1). Asimismo, se realizaron pruebas de razonamiento es- pacial a todos los participantes antes y despus del ex- perimento. Los resultados obtenidos en el pretest sirven como lnea de base que permite apreciar mejor los cam- bios generados por la manipulacin de la variable inde- pendiente en los diferentes grupos al comparar los re- sultados obtenidos luego de la exposicin a las distintas condiciones experimentales (postest) con aqullos ob- tenidos previamente (pretest). Para la realizacin de las dos mediciones, se opt por dividir el test de razona- miento espacial en dos mitades de 22 tems cada una, aplicndose una de ellas en la instancia de pretest y la otra durante el postest. El criterio que se tuvo en cuenta para la divisin fue tems pares e impares, de este mo- do, mediante dicho procedimiento se asegur que en cada instancia de evaluacin se incluyeran tems co- rrespondientes a las diferentes dimensiones de la inteli- gencia espacial, garantizando de esta manera la equi- valencia de las pruebas. La decisin de dividir la prueba de razonamiento espacial en dos partes se realiz te- niendo en cuenta la previsin de posibles sesgos que pudieren producirse en los resultados obtenidos debido al efecto de la prctica (Len & Montero, 1993). En el presente estudio, cabe suponer que dicho efecto podra estar asociado con la repeticin de la prueba de razona- miento espacial, afectando el rendimiento de los sujetos en el postest, con lo cual resultara difcultoso determi- nar si los cambios observados en el rendimiento de los sujetos luego de la exposicin a las diferentes condicio- nes experimentales se deben a la manipulacin de la variable independiente o a la familiaridad con la prueba. El experimento se llev a cabo utilizando computadoras PC y auriculares. Antes de comenzar los sujetos frma- ron un consentimiento informado acordando su partici- pacin voluntaria en el estudio. Seguidamente a ello completaron la escala PANAS (Medrano et al., 2011) que se coloc de manera adjunta a la solicitud de con- sentimiento. Luego de completar el PANAS se dio co- mienzo al experimento. Para la realizacin del mismo se dise el programa especial MEES 2.01 (Mozart Effect Evaluation Software) al cual los participantes accedie- ron ingresando su nmero de documento, solicitado previamente por el autor del estudio. Una vez ejecutado dicho programa presenta en la pantalla el instructivo pa- ra la primera prueba (pretest). Luego de que el sujeto responde a la primera consigna, el programa da paso a la consigna siguiente y as sucesivamente hasta com- pletar el pretest. Una vez cumplimentado el pretest, el programa reproduce durante diez minutos las diferentes condiciones musicales (Mozart vs control), a continua- cin de lo cual se presenta la segunda prueba (postest). Tras la fnalizacin del experimento se aplic nueva- mente la escala PANAS con el propsito de monitorear las emociones y determinar si se produjeron cambios signifcativos en el estado emocional de los sujetos tras la aplicacin de las distintas condiciones experimenta- les, que pudiesen llegar a infuir en el rendimiento de los sujetos durante el postest. Los datos obtenidos fueron almacenados en un paquete de datos que luego se car- g al programa estadstico SPSS 15.0 para su anlisis. Resultados Se realiz un anlisis de covarianza tomando como co- variable el rendimiento en la prueba antes de la aplica- cin de las condiciones experimentales (Mozart y Con- trol). Los resultados se presentan en la Tabla 2. Como se observa en la tabla 2, el anlisis de covarianza mostr efectos de interaccin entre el pretest (Pre. Espa- cial) y el rendimiento en el postest (F = 36,472; p < 0.05). En cambio, el anlisis de los grupos experimentales indi- ca que no hay diferencia en el rendimiento entre msicos y no msicos (F = 0,92; p = 0.763). De igual modo la va- riable Condicin no mostr efectos signifcativos (F = 2,027; p = 0.161). Por el contrario, se observ un efecto de interaccin signifcativo entre las condiciones de es- cucha y los grupos experimentales, F = 4,353; p < 0.05. Concretamente, se observaron diferencias signifcativas en el rendimiento entre el grupo de no msicos y el gru- po de msicos expuestos a Mozart, siendo superior el rendimiento en el primer grupo, confrmndose de esta manera la primera hiptesis planteada, que establece la existencia de diferencias signifcativas entre los grupos mencionados en una prueba de razonamiento espacial luego de haber escuchado a Mozart. Debido a que no es factible realizar un anlisis de com- paraciones mltiples que permitan determinar las dife- rencias signifcativas que existen entre diferentes pares de grupos cuando los niveles de la variable independien- te son menos de tres, se procedi a examinar visualmen- te las diferencias mediante el grfco de interaccin. Contrariamente a la segunda hiptesis planteada, que establece la ausencia diferencias signifcativas en el rendimiento en la prueba de razonamiento espacial en- tre el grupo de msicos que fue expuesto a la sonata K448 de Mozart y el grupo de msicos que no recibi 63 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA tratamiento (control), el rendimiento de msicos-control fue superior al de msicos-Mozart como se puede ob- servar en el grfco. Finalmente, no se advirtieron dife- rencias signifcativas en los resultados de los grupos de msicos y no msicos obtenidos de la aplicacin del PANAS antes y despus de completar la prueba (F = 0,007; p = 0,932). Discusin Desde el experimento llevado a cabo por Rauscher et al. (1993), el Efecto Mozart ha sido objeto de gran inte- rs cientfco, replicndose en numerosas oportunida- des (Stough, Kerkin, Bates & Mangan, 1994; Newman, Rosenbach, Burns, Latimer, Matocha & Rosenthal, 1995; Rideout & Taylor, 1997; Wilson & Brown, 1997; Ri- deout, Dougherty & Wenert, 1998; Steele, Bass & Cro- ok, 1999; Hetland, 2000; McCutcheon, 2000; McKelvie & Low, 2002). Sin embargo, los resultados obtenidos en estos estudios no son consistentes, por lo cual el Efec- to Mozart contina siendo objeto de debate en el mbi- to cientfco. El presente estudio se llev a cabo con el propsito de aportar evidencia cientfca sobre la existencia del efecto Mozart. Consistentemente con los resultados de estu- dios previos (Rauscher et al., 1993; Rauscher et al., 1995; Rideout et al., 1997; Wilson et al., 1997; Rideout et al., 1998; Hetland, 2000), se observ que la exposicin a Mozart produjo una mejora en el rendimiento en una prueba de razonamiento espacial en el grupo de no m- sicos, no as en el grupo de msicos, observndose dife- rencias signifcativas entre ambos grupos, de manera si- milar a lo observado en el estudio de Aheadi et al. (2010). El mecanismo por el cual sucede este efecto es incier- to. Al respecto, Huges y Fino (2001) consideraron que dicho efecto estara asociado a la estimulacin de las mismas regiones cerebrales (neocrtex) implicadas en el razonamiento espacial; posteriormente Douglas y Bi- lkey (2007) encontraron evidencia convergente para es- ta hiptesis al estudiar a sujetos con amusia (i.e., desor- den clnico de la percepcin, la lectura, escritura y eje- cucin musical) y encontrar que su rendimiento en una prueba de razonamiento espacial era signifcativamente menor en comparacin al de un grupo control sano. Otros autores han sealado que la relacin entre la ex- posicin a la msica y el rendimiento cognitivo estara mediada por el humor y el nivel de excitacin del oyen- te (Thompson et al. 2001; Husain et al. 2002; Schellen- berg et al. 2007). Desde esta perspectiva, el incremen- to en el rendimiento cognitivo de los sujetos tiene su ori- gen en los estados de humor positivos que producen un aumento de los niveles de circulacin del neurotransmi- sor dopamina (Ashby et al., 1999). Dicho neurotransi- mor se liberara, durante las experiencias afectivas po- sitivas, en el rea tegmental ventral, que tiene mltiples eferentes en la corteza prefrontal. De esta manera, la mejora en el desempeo cognitivo podra explicarse por los efectos de la dopamina en la corteza prefrontal, liberada por los estados emocionales positivos. Sin em- bargo, en el presente estudio no se hallaron variaciones en el estado emocional de los grupos a lo largo del ex- perimento, ni tampoco diferencias signifcativas entre los grupos luego de ser expuestos a las diferentes con- diciones experimentales. Por lo tanto, las evidencias obtenidas parecen indicar que los cambios observados en el rendimiento de los grupos de msicos y no msi- cos no se deben a factores emocionales y/o los efectos de stos. Por otra parte, se han propuesto diferentes explicacio- nes acerca de la ausencia del efecto Mozart en msi- cos. Una de ellas se basa en el procesamiento cerebral de la msica en msicos y no msicos. En esta lnea Bever y Chiarello (1974) y Davidson y Schwartz (1977) sostienen que el efecto diferencial de la msica en la in- teligencia espacial de no msicos y msicos se debe a que los primeros tienden a procesar la msica en el he- misferio derecho, mientras que los msicos entrenados tienden a tratar la msica en ambos hemisferios. De es- te modo, si la mejora en el rendimiento en tareas espa- ciales ocasionada por la msica de Mozart depende de la activacin de regiones de hemisferio derecho, y si s- lo los no msicos procesan la msica exclusivamente en el mismo hemisferio, esto explicara por qu nica- mente los no msicos mejoran en el rendimiento en pruebas espaciales despus de escuchar a Mozart. Otra hiptesis propuesta para explicar los lmites del efecto Mozart en msicos refere a la instruccin musi- cal y a la infuencia de sta sobre las habilidades espa- ciales. Las investigaciones en nios apoyan la idea de que el entrenamiento temprano en msica mejora las capacidades espaciales y que estas mejoras se sostie- nen durante el tiempo (Rauscher & Hinton, 2003). En consecuencia, la ausencia de diferencias signifcativas en el rendimiento de msicos y de no msicos podra deberse a que el razonamiento espacial de los primeros se encuentra ya aumentado por la instruccin formal en msica. Claramente, ms investigaciones son necesarias para explorar los factores que intervienen en la mejora de habilidades espaciales luego de la exposicin a la msi- ca de Mozart. En este sentido, la tecnologa de neuro- imagen es un valioso recurso para examinar las bases neurofsiolgicas del procesamiento musical que permi- tan comprobar la hiptesis de la activacin hemisfrica. No obstante, sera tambin pertinente que en futuras in- vestigaciones se estudiara nuevamente a grupos de msicos y no msicos incorporando una tercera condi- cin de escucha (p.e., msica minimalista) a las de con- trol y Mozart que permita evaluar con mayor precisin si los efectos sobre el rendimiento cognitivo son especf- cos de la sonata k448 de Mozart, o si se trata de un efecto generalizado de la msica. A su vez tambin po- dran estudiarse los niveles de motivacin de los grupos al momento de llevar a cabo el experimento. Por ltimo, una investigacin de carcter longitudinal del razona- miento espacial de personas que estudian msica apor- tara datos para la hiptesis de la formacin musical y el incremento a largo plazo de la inteligencia espacial. 64 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA Tabla 1 Grupos que se utilizaron en el presente estudio Profesin de los Participantes
Msicos No Msicos Condicin Mozart Msicos + Mozart No Msicos + Mozart (N=15) (N=15) Control Msicos + Control No Msicos + Control (N=15) (N=15) Tabla 2 Resultados del Anlisis de Covarianza Fuente Suma de los cuadrados tipo III cuadrtica cuadrado parcial
Modelo corregido 61,708a 4 15,427 11,264 0,000 0,469 a. R cuadrado = 0,469 (R cuadrado corregido = 0,427) b. Variable dependiente: rendimiento pos-espacial Interseccin 42,017 1 42,017 30,680 0,000 0,376 Pre. Espacial 49,949 1 49,949 36,472 0,000 0,417 Msico 0,126 1 0,126 0,092 0,763 0,002 Condicin 2,776 1 2,776 2,027 0,161 0,038 Msico * 5,961 1 5,961 4,353 0,042 0,079 Condicin Error 69,846 51 1,370 Total 22173,000 56 Total corregido 131,554 55 Gl Media F Sig. Et REFERENCIAS Aheadi, A., Dixon, P. & Glover, S. (2010). A limiting feature of the Mozart effect: listening enhances mental rotation abilities in non- musicians but not musicians. Psychology of Music, 107-117. Alalami, U., Alalami, S. & Cooper, R. G. (2009). The effect of music on cognitive emotional response in undergraduate students studying health-related courses: a pilot study. Turkish Journal of Medical Sciences, 39 (3), 501-502. Arnheim, R. (1986). El pensamiento visual. Barcelona: Paids. 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Brasil Therefore, most research on sleep and visual percep- tion indicates losses in the ability to accurately perceive visual information on the environment due to sleep dep- rivation. In shift workers, these errors can contribute to the increased number of accidents related to work of na- ture perceptual, collaborating for the safety of workers and their environment. Key words Sleep Perception Visual Performance Introduo O ciclo sono-viglia, caracterizado por uma alternncia regular do sono com a viglia, trata-se de um ritmo cir- cadiano que em condies naturais apresenta sincroni- zao com fatores ambientais e oscila com um perodo de 24 horas (Kleitman, 1963). Marques, Golombek e Moreno (1999) complementam esta afrmativa ao des- creverem-no como ritmo sincronizado por fatores ex- genos, tais como o ciclo claro-escuro, horrios de tra- balho, estudo e atividades sociais, mantendo tambm relao de fase com outros ritmos internos, representa- dos pela secreo de hormnios como o cortisol, a me- latonina e a somatropina (hormnio do crescimento). O sono tambm pode ser visto como um comportamento ativo, repetitivo e reversvel que cumpre diversas fun- es, como o reparo e a consolidao da aprendizagem ou da memria, alm de ser responsvel por processos restaurativos em todo o organismo (Curcio, Ferrara & De Gennaro, 2006). Os processos cognitivos (como a aprendizagem, a me- mria, o raciocnio e as funes executivas), que esto diretamente relacionados ao desempenho cognitivo, po- dem ser infuenciados pelo sono (Dewald, Meijer, Oort, Kerkhof & Bogels, 2010; Roberts, Roberts & Duong, 2009). O desempenho cognitivo pode ser infuenciado especifcamente pelo nmero de horas em que um indi- vduo no esteve dormindo (privao do sono), pela con- solidao do sono, e pela fase circadiana (hora) em que o desempenho cognitivo avaliado (Dorrian & Dinges, 2006). As consequncias mais comuns sobre o desem- penho cognitivo, devido a privao de sono, so os lap- sos comportamentais, isto , perodos em que h ausn- cia de respostas cognitivas (por exemplo, os perodos in- voluntrios de sono), as respostas retardadas, que ten- dem a ser mais freqentes quanto maior o tempo da ta- refa a ser executada, e os errors of commission, erros que ocorrem na ausncia de estmulos, como por exem- RESUMEN A privao de sono afeta o desempenho cognitivo, o qual pode ter maior comprometimento devido a falhas na percepo visual, levando a ocorrncia de erros per- ceptivos. Este trabalho tem como objetivo revisar a lite- ratura sobre os efeitos da privao de sono na percep- o visual que podem levar a diminuio do desempe- nho cognitivo em trabalhadores em turno. Os resultados encontrados mostraram que privao de sono causa a formao de imagens turvas e duplas sobre a retina, di- minuio na vigilncia visual, acuidade visual, futuao no tamanho pupilar e alterao dos movimentos sacdi- cos, relacionando-se aos erros perceptivos. Estudos sobre privao e percepo visual em trabalhadores em turno encontraram erros de identifcao, deteco, confuso espacial e perceptual e erros de discrimina- o entre estmulos visuais. E, ainda, fenmenos de ne- gligncia visual, viso de tnel e processamento mais lento na via parvocelular, quando comparados via magnocelular. Portanto, a maioria das investigaes sobre sono e percepo visual indica prejuzos na ca- pacidade de perceber com preciso informaes visu- ais do ambiente devido privao de sono. Em traba- lhadores em turno, estes erros podem contribuir para o maior nmero de acidentes relacionados ao trabalho de natureza perceptual, colocando em risco a segurana do trabalhador e seu ambiente. Palabras clave Sono Percepo Visual Desempenho ABSTRACT EFFECTS OF SLEEP DEPRIVATION ON VISUAL PERCEPTION IN SHIFT WORKERS Sleep deprivation affects cognitive performance, which may have more severe due failures in visual perception, leading to perceptual errors. This paper aims to review the literature on the effects of sleep deprivation on visu- al perception that can lead to decreased cognitive per- formance in shift workers. The results showed that sleep deprivation causes the formation of double and blurred images on the retina, a decrease in visual surveillance, visual acuity, fuctuation in pupil size and modifcation of saccade related to the perceptual errors. Studies on vis- ual perception and deprivation in shift workers found er- rors in identifcation, detection, spatial and perceptual confusion and errors of discrimination between stimuli. There is also the phenomena of visual neglect, tunnel vision and slower processing in the parvocellular path- way, when compared to the magnocellular pathway. 67 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA plo, as reaes de alarme falso numa tarefa de vigilncia (Alhola & Polo-Kantola, 2007). Alm do supracitado, quedas no desempenho durante a privao de sono podem estar associadas a falhas na percepo visual, levando a erros perceptivos. Estes er- ros ocorrem quando a informao visual no detectada ou erroneamente identifcada, ocasionando omisses e retardos em reconhecer estmulos visuais (Kong, Soon & Chee, 2011). No trabalho, estes erros perceptivos dif- cultam a qualidade de execuo de muitas tarefas que exigem habilidade visual e, em situaes extremas, po- dem ser perigosos para o trabalhador e seu ambiente (Killgore, Kendall, Richards & Bride, 2007). Este trabalho tem como objetivo revisar a literatura so- bre os efeitos da privao de sono na percepo visual que podem levar diminuio do desempenho cogniti- vo em trabalhadores em turno. A reviso consistiu na busca sistemtica em bases de dados digitais, tais co- mo PubMed, PsycINFO, SCOPUS e ScienceDirect. As palavras-chave utilizadas em combinao nos bancos de dados foram: sleep deprivation, visual perception, cognitive performance e shift work. Efeitos da privao de sono na percepo visual A percepo visual pode ser defnida como a integrao das informaes do ambiente, como pessoas, cenrios e objetos, pelo sistema visual. Inmeras conexes neurais e diversas reas corticais interagem para que a imagem chegue ao crtex visual, onde ser processada e forma- da a percepo visual (Bear, Cannors & Paradiso, 2002). Portanto, a capacidade de percebermos corretamente cenas e informaes visuais pode ser afetada por deter- minadas condies ou patologias que afetem reas cere- brais relacionadas ao processamento visual, como o caso da privao de sono (Schiffman, 2005). Estudos de neuroimagem funcional demonstram as reas cerebrais envolvidas com a percepo visual que sofrem alteraes durante a privao de sono, tais co- mo: o crtex parietal, relacionado com a localizao e movimento dos objetos; a rea inicial do crtex visual (V1), responsvel pelo processamento visual inicial de caractersticas bsicas das imagens e a regio do cr- tex nfero temporal, que est envolvida com a percep- o e reconhecimento dos objetos (Kandel, Schwartz & Jessel, 2003; Schwartz, 2004; Schiffman, 2005). Con- seqentemente, essas alteraes podem levar a erros funcionais de percepo, incluindo a incapacidade para discriminar ou detectar o material visual ou, ainda, a percepo errnea de uma cena visual (Endsley, 1995). Dados da literatura indicam que apenas uma nica noi- te de privao de sono j pode ser sufciente para redu- zir a sensibilidade da percepo visual (Rog & Gabau- de, 2009). Outros estudos relatam que indivduos priva- dos de sono podem apresentar formao de imagens ir- reais sobre a retina, como vises turvas e duplas, oca- sionando falhas na percepo visual. Os erros e aluci- naes visuais tendem a aumentar com a durao da viglia. Outras investigaes sobre a deteriorao da funo perceptiva, em condies de fadiga ou viglia prolongada, relatam uma diminuio na vigilncia visu- al, acuidade visual e deteco visual em indivduos pri- vados de sono (Lieberman, Coffey & Kobrick, 1998; Russo et al., 2005). Kong et al. (2011) tambm encon- traram declnio na capacidade de processamento visu- al em indivduos saudveis, privados de sono. Outros achados relacionando a privao de sono com o sistema ocular indicam que, nessas condies, os indi- vduos podem apresentar futuao no tamanho pupilar, alteraes na fxao oculomotora e no dimetro pupi- lar (De Gennaro, Ferrara, Curcio e Bertini, 2001; McLa- ren, Hauri, Lin, e Harris, 2002). Mudanas do tamanho da pupila parecem refetir no reconhecimento e proces- samento cognitivo. Logo, alteraes nessas variveis podem indicar maior risco de falhas na percepo visu- al, condizindo ao erro (De Genaro et al., 2001) O estudo de De Gennaro et al. (2005) demonstrou os efeitos negativos da privao de sono no desempenho de movimentos sacdicos (movimentos que direcionam os olhos s reas a serem) e na busca oculomotora. O estudo consistiu na anlise dos movimentos sacdicos e do movimento ocular em indivduos privados de sono h 40 horas. Os resultados mostraram um declnio sig- nifcativo da velocidade dos movimentos sacdicos aps a privao de sono. Estes resultados mostram uma relevncia operacional signifcativa, pois h evi- dncias que alteraes na velocidade dos movimentos sacdicos podem estar negativamente correlacionadas com taxas de coliso de veculos em tarefas de simula- o (De Gennaro, Ferrera, Urbani & Bertini, 2000) Estas investigaes sugerem que a privao de sono po- de afetar diretamente a capacidade de processar ade- quadamente e integrar uma grande variedade de estmu- los ao mesmo tempo, alm de aumentar a chance da ocorrncia de redues na percepo da situao como um todo. Estas redues podem impedir o desempenho de tarefas com segurana em determinadas profsses, devido incapacidade do crebro para processar e inte- grar informaes visuais de diferentes fontes em um todo signifcativo e relevante (Russo et al., 2005). Sono e percepo visual em trabalhadores em turnos Os trabalhadores em turno so afetados por diversos fatores que conduzem a queda do desempenho, como a privao de sono. Um grave problema associado a esta queda do desempenho a maior propenso ocorrncia de erros no ambiente de trabalho, dentre eles, os erros perceptivos (Mello, Bittencourt, Pires, Sil- va & Tufk, 2008). Algumas profsses que funcionam sob o esquema de turnos podem sofrer mais com as conseqncias dos erros na percepo visual, como motoristas, aviadores e controladores de trfego areo, pois so atividades que exigem a percepo visual ati- va, isto , o reconhecimento do estmulo e um reconhe- cimento relativamente rpido da sua localizao, contri- buindo para a reduo do desempenho (Shorrock, 2006). Chee et al. (2008) investigaram se o declnio do desem- 68 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA penho cognitivo na privao de sono estaria relaciona- do a o maior nmero de falhas (lapsos) perceptivas, de- correntes de menor ativao nas reas cerebrais rela- cionadas ao processamento visual e ateno visual, o que levaria a riscos potencias para motoristas ao con- duzirem veculos privados de sono. Atravs da tcnica de Ressonncia Magntica Funcional, os autores anali- saram a atividade cerebral dos indivduos durante uma tarefa de ateno visual seletiva, na qual era solicitado que identifcassem, apertando um boto, entre letras grandes e pequenas. A velocidade e tempo de reao foram avaliados no estudo. Os resultados mostraram que respostas erradas e mais lentas estavam associa- das a quedas drsticas na atividade do crtex visual, como tambm reduo da capacidade das regies de controle frontal e parietal para aumentar a ativao em resposta a lapsos. Os resultados sugerem que os lap- sos na percepo visual podem ser bastante perigosos para trabalhadores em turnos, aumentando o risco de acidentes com veculos. Russo et al. (2005) desenvolveram uma pesquisa com o objetivo de investigar a negligncia visual (referente incapacidade em reconhecer ou admitir alguma infor- mao visual do ambiente) sobre o desempenho em uma tarefa de simulao de vo em pilotos da fora a- rea em 26 horas de viglia continua. Prejuzos signifca- tivos foram encontrados na percepo visual aps 19 horas de viglia contnua, apontando para os efeitos ne- gativos que a privao de sono pode causar no proces- samento de informaes visuais. A pesquisa demons- trou ainda que os dfcits no processamento visual fo- ram correlacionados com diminuio do desempenho motor, sugerindo que falhas na percepo de estmulos visuais podem acarretar prejuzos no desempenho em tarefas motoras que necessitem de pistas visuais para serem executadas. H evidncias, ainda, de que a perda de sono pode causar o efeito conhecido como viso de tnel. No en- tanto, as investigaes nessa rea apontam resultados contraditrios (Mills, Spruill, Kanne, Parkman & Zhang, 2001). A viso de tnel pode ser defnida como uma re- duo do campo visual til, isto , como a difculdade do indivduo em detectar informaes visuais localizadas na periferia do campo visual (regio perifrica da reti- na), restringindo a deteco ao centro do campo visual (regio central da retina de maior acuidade visual, a f- vea) (Jackson et al., 2008). Um estudo de Rog, Pbayle, El Hannachi e Muzet (2003) demonstrou o efeito da viso de tnel em motoris- tas privados de sono. O experimento consistiu na realiza- o de uma tarefa montona de simulao, na qual os motoristas deveriam seguir um veiculo por uma hora. A tarefa dos motoristas consistia em identifcar estmulos que apareceriam brevemente na estrada de simulao, tanto na regio central, quanto na regio perifrica do campo visual. Os resultados mostraram uma reduo na capacidade de processar sinais perifricos, na medida em que os voluntrios se mostravam mais sonolentos. O trabalho de Jackson et al. (2008) tambm avaliou o efeito de viso de tnel em motoristas profssionais priva- dos de sono por 27 horas e, ainda, avaliou as respostas estmulos visuais das vias parvocelular (P) - caracteri- zada pela menor velocidade de processamento e pela deteco de cor e forma dos objetos e magnocelular (M) - responsvel pelo processamento de estmulos visuais transitrios e acromticos (Kandel et al., 2003). Para a avaliao da viso de tnel, os voluntrios deveriam fxar o olhar no centro da tela de um computador enquanto es- tmulos visuais eram apresentados regio central e ao campo visual perifrico. A tarefa durou 3,5 minutos no to- tal. J para a avaliao da resposta da via P versus via M, foram apresentados, no computador, estmulos visu- ais em preto e branco (para a via M) e coloridos (para a via P). Os resultados no mostraram os efeitos da viso de tnel. No entanto, pode-se observar um processa- mento mais lento na via P em comparao com a via M. Assim, a pesquisa mostrou que dfcits no desempenho de tarefas visuais durante a privao de sono podem ser devido a processos cognitivos superiores, ao invs de processamento visual inicial, indicando que a privao de sono pode impedir, diferencialmente, o processamen- to de informaes visuais mais detalhadas. As discrepncias nos resultados podem ser devido s diferenas da natureza das tarefas perceptivas empre- gadas, j que estudos demonstram que a capacidade de processar estmulos perifricos tende a degradar em tarefas montonas e longas, que envolvem a viso cen- tral e perifrica (Rog et al., 2002) Em todo caso, o efei- to de viso de tnel pode apresentar um perigo poten- cial para motoristas, pois com o campo visual til redu- zido, o indivduo torna-se mais lento para detectar infor- maes visuais na estrada, ou ainda pode no perceber todos os estmulos, favorecendo a ocorrncia de erros e maior risco de acidentes (Rog et al., 2003). J em relao profsso de controladores de trfego areo, em que a percepo acurada e oportuna da in- formao visual fundamental para a segurana da aviao, a literatura tambm indica a ocorrncia de er- ros perceptivos relacionados com a privao de sono, que podem levar a maior ocorrncia de erros no am- biente de trabalho (Turhan & Turkey, 2009). A pesquisa de Shorrock (2006), por exemplo, procurou investigar os tipos de erros de percepo visual que ocorrem em controladores de trfego areo, atravs de dois estu- dos: o primeiro foi realizado por meio de um levanta- mento de dados a partir de uma entrevista semi estrutu- rada com 28 controladores do Reino Unido, na qual os controladores foram solicitados a descrever o tipo de erros que lembravam fazer no dia-a-dia, independente- mente de erros que j levaram a incidentes. O segundo estudo consistiu em uma reviso de 48 acidentes are- os, por conta de falhas de controladores de vo ao lon- go de trs anos. Os resultados do primeiro estudo mostraram um relato de 66 erros perceptivos, em contraste com 42 erros de memria, 31 erros de tomada de deciso (incluindo o planejamento e julgamento) e 22 erros de ao ou con- trole de fala. No segundo estudo, 45 erros foram classi- 69 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA fcados como erros de percepo, 20 de memria, 72 de tomada de deciso e 13 erros de ao ou controle de voz. Os principais erros perceptivos encontrados nos dois estudos foram: erros de identifcao (falta de iden- tifcao ou identifcao tardia), erros de deteco (sem deteco ou deteco tardia), confuso espacial e perceptual, efeito de viso de tnel e falha na discrimi- nao entre estmulos. Estes erros esto relacionados a falhas e leitura errada de informaes da faixa do pro- gresso de vo, ou m interpretao do plano do vo. Os erros na leitura das informaes dos planos de vo ten- deram a ocorrer quando as informaes eram pareci- das, como indicativos similares (confuso perceptual), ou quando as informaes estavam muito prximas, tais como faixas adjacentes (confuso espacial) (Shor- rock, 2006). Consideraes finais Os estudos levantados na literatura sugerem que o de- sempenho cognitivo pode ser seriamente comprometi- do devido defcincia do processamento de informa- o visual durante a privao de sono. Estes resultados tm implicaes diretas para os profssionais submeti- dos ao regime de trabalho em turnos, que sofrem com a privao de sono, pois os erros perceptivos podem co- locar em risco a segurana dos trabalhadores e das pessoas ao seu redor, devido maior probabilidade da ocorrncia de acidentes por conta das falhas em reco- nhecer os estmulos visuais. Estudos futuros podero identifcar e caracterizar fatores no discutidos por esta reviso, focando em aspectos scio-econmicos, ocu- pacionais e hbitos de vida, bem como os hbitos de sono de trabalhadores em turnos. BIBLIOGRAFA Alhola, P. & Polo-Kantola, P. (2007). Sleep deprivation: Impact on cognitive performance. Neuropsychiatric Disease and Treatment, 3(5), 553-567. Bear, M. F.; Connors, B. W., & Paradiso, M. A. (2002). 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So Paulo: Atheneu. 70 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA CONSIDERACIONES SOBRE EL ABORDAJE TERAPUTICO MULTIMODAL PARA EL TRATAMIENTO DE TDAH Stelzer, Florencia; Mazzoni, Cecilia; Cervigni, Mauricio; Martino, Pablo Instituto Rosario de Investigacin en Ciencias de la Educacin (IRICE-CONICET) - Centro de Investigacin en Neurociencias de Rosario (CINR). Argentina tions that allow beating both primary and secondary symptoms associated with ADHD. Key words ADHD Multimodal Treatment Infants INTRODUCCIN El trastorno por dfcit de atencin con hiperactividad (TDAH), constituye una alteracin neuroconductual que afecta entre un 5 - 10% de los infantes y adolescentes (Faraone, Sergeant, Gillberg, Biederman, 2003; Cardo, Barcel, Llobera, 2007). Asimismo, parte de las mani- festaciones semiolgicas secundaras asociadas a di- cha alteracin, persisten en la vida adulta. La ltima edi- cin del manual diagnstico y estadstico de los trastor- nos mentales (DSM IV), establece tres subtipos diag- nsticos de dicha alteracin en funcin del predominio sintomatolgico observado. Los mismos son designa- dos: predominantemente inatento, predominantemente hiperactivo-impulsivo y combinado. Por otro lado, el TDAH presenta una comorbilidad elevada respecto de otros trastornos psiquitricos, tales como los trastornos del estado de nimo, el trastorno negativista desafante, la dislexia, la disgrafa y la discalculia. En lo relativo al abordaje teraputico del mismo, las di- rectivas clnicas Europeas (Taylor et al., 2004) reco- miendan un abordaje multimodal, diagramado confor- me a las caractersticas del infante. Dentro de las mis- mas se propone el tratamiento con psicofrmacos esti- mulantes como abordaje primario (principalmente me- thylphenidate). Asimismo, se sugieren como alternati- vas teraputicas complementarias, la utilizacin de te- rapia cognitivo- comportamental y el entrenamiento pa- rental. Este hecho se debe a que, si bien el tratamiento farmacolgico presenta efectos positivos en la sintoma- tologa primaria del trastorno en el 80% de los pacien- tes, las manifestaciones secundarias asociadas al mis- mo (difcultades en el aprendizaje, ansiedad, alteracio- nes en las competencias emocionales y sociales, etc.) no evidenciaran mejoras signifcativas ante este tipo de abordaje. Asimismo, la persistencia de tales alteracio- nes expondra a los infantes al riesgo de desarrollo de desordenes de personalidad, depresin, abuso de dro- gas o alcohol y criminalidad (Dalsgaard, Mortensen, Frydenberg, Thomsen, 2002; Hectman, & Weiss, 1983). En la presente ponencia, se realizar una revisin de al- gunos trabajos en los cuales se ha estudiado el efecto RESUMEN El trastorno por dfcit de atencin con hiperactividad (TDAH), constituye una alteracin neuroconductual que afecta entre un 5 - 10% de los infantes y adolescentes. Numerosos autores han sugerido la necesidad de un abordaje teraputico multimodal de ste (psicofrma- cos estimulantes, terapia cognitivo- comportamental, entrenamiento parental y docente). No obstante, en la actualidad predomina la utilizacin de psicofrmacos estimulantes para el tratamiento del mismo. Si bien es- tos presentan efectos positivos en la sintomatologa pri- maria del trastorno en el 80% de los pacientes, las ma- nifestaciones secundarias asociadas al mismo no sufri- ran mejoras signifcativas ante dicho tipo de abordaje. En la presente ponencia, se realizar una revisin de al- gunos trabajos en los cuales se ha estudiado el efecto teraputico de un abordaje cognitivo-comportamental para el tratamiento del TDAH. El objetivo de la misma, es describir algunos de los diseos empleados para el estudio de la efectividad de dicho abordaje, contrastan- do los resultados hallados entre los diversos autores respecto de la efcacia de los mismos. Se concluir des- tacando la necesidad de desarrollar intervenciones a largo plazo, que permitan paliar tanto la sintomatologa primaria como la secundaria asociada al TDAH. Palabras clave TDAH Tratamiento Multimodal Infantes ABSTRACT CONSIDERATION ABOUT MULTIMODAL TREATMENT OF ADHD Attention defcit hyperactivity disorder, (ADHD) is a neu- robehavioral disorder that affects between 5 to 10% of infants and adolescents. Many authors have suggested the importance of multimodal therapeutic approach of it (psychotropic stimulants, cognitive-behavioral therapy, parental and teacher training). However, currently phar- macological approach is broadly used. While it has pos- itive effects on primary symptoms of the disorder in 80% of patients, the secondary manifestations associated with it would not suffer signifcant improvements to this type of approach. In this paper, we will conduct a review of some work which has studied the therapeutic effect of a cognitive-behavioral therapy for ADHD treatment. The purpose of it is to describe some of the designs used to study the effectiveness of this approach, contrasting the results between different authors. We will conclude highlighting the need of developing long-term interven- 71 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA teraputico de un abordaje multimodal para el trata- miento del TDAH. El objetivo de la misma es describir algunos de los diseos empleados para el estudio de la efectividad de dicho abordaje, contrastando los resulta- dos hallados entre los diferentes autores. ESTUDIOS REVISADOS Storebo et al., (2011) realizaron un estudio en el cual evaluaron la efcacia del entrenamiento en habilidades sociales (EHS) y el entrenamiento parental (EP), como complemento al tratamiento farmacolgico (TF), en el alivio de la sintomatologa primaria y secundaria de ni- os con diagnstico de TDAH (n=52). Los infantes (ran- go etario entre 8 a 12 aos de edad) fueron examinados al inicio de la intervencin, a los 3 y a los 6 meses de la misma. Los infantes y sus progenitores fueron distribui- dos aleatoriamente en dos grupos. El primer grupo reci- bi EHS y EP complementario al TF. Por el contrario, el segundo grupo recibi exclusivamente TF. Las sesiones de EHS y EP fueron implementadas con una frecuencia semanal durante el transcurso de 8 semanas. Las mis- mas fueron grupales (12 a 16 participantes) con una du- racin de 90 minutos cada una. En estas se trabajo con diversas tcnicas de intervencin psicolgica, tales co- mo: role-play, ejercicios fsicos, juego simblico, etc. Los resultados a los cuales arribaron Storebo et al., re- velaron que, a diferencia del grupo con TF exclusivo, los nios pertenecientes al grupo que reciba EHS y EP co- mo complemento al TF, presentaban mejoras signifca- tivas en las competencias sociales y emocionales, tan- to a los 3 como a los 6 meses de inicio del tratamiento. Si bien estos resultados avalaran el efecto positivo de la utilizacin de abordajes teraputicos cognitivos-con- ductuales y del entrenamiento parental como comple- mento del tratamiento farmacolgico del TDAH, el ta- mao de la muestra implicada y el breve tiempo trans- currido para la realizacin de la evaluacin post-test de los resultados, difcultan la extraccin de conclusiones exhaustivas respecto de este trabajo. Por otro lado, Herrero, Hierro, Jimenz & Casas (2010) realizaron una intervencin psicosocial en nios entre 7 y 10 aos, con diagnstico de TDAH subtipo combinado (n=27). La misma estaba integrada por 3 programas aplicados a los nios, padres y docentes, respectiva- mente. Las intervenciones tuvieron una duracin de 10 semanas. El programa realizado con los infantes utiliza- ba tcnicas cognitivas-conductuales destinadas a facili- tar el desarrollo del control inhibitorio y ciertas habilida- des sociales (16 sesiones de 45 min. de duracin). El modelo de intervencin aplicado a los padres, propor- cionaba informacin sobre el TDAH, y tcnicas de regu- lacin de la conducta (10 sesiones de 2 horas de dura- cin). Finalmente, la intervencin con los docentes in- cluy la enseanza de algunas nociones sobre el TDAH y tcnicas de regulacin de la conducta, conforme a las normativas escolares (10 sesiones de 4 horas de dura- cin). Los resultados a los cuales arribaron estos auto- res, revelaron que los nios participantes del programa, haban optimizado su desempeo acadmico en lengua y matemtica, tras fnalizar el mismo. Asimismo, tales mejoras persistiran luego de un ao de la aplicacin de la intervencin. Por otro lado, se observaron mejoras en la capacidad de adaptacin emocional de los nios, en las manifestaciones de timidez y retraimiento observa- das por los padres y de timidez y ansiedad registradas por los docentes. Asimismo, los infantes tratados evi- denciaron mejoras signifcativas en la capacidad de adaptacin social general. Si bien los resultados a los cuales arribaron estos autores, sealaran un efecto po- sitivo de la intervencin psicosocial sobre las compe- tencias sociales acadmicas y emocionales de los ni- os, el tamao de la muestra implicada y la ausencia de un grupo control, limitaran la generalizacin de los re- sultados de dicho estudio. No obstante, algunos estu- dios previos habran arribado a resultados equivalentes a los de Herrero y col. (Miranda, Presentacin, & Soria- no, 2002; Pelham et al., 2005). Finalmente, el Instituto Nacional de Salud Mental de EE.UU., a travs del Grupo Colaborativo para el Estudio del Tratamiento Multimodal del TDAH (MTA Cooperati- ve Group, 1999ab), realiz un estudio comparado de la efectividad de distintas estrategias teraputicas utiliza- das para el tratamiento de TDAH. En el mismo, 579 ni- os entre 7 aos y 9 aos y 9 meses de edad, con diag- nstico de TDAH subtipo combinado, fueron asignados aleatoriamente a distintos tipos de tratamientos, duran- te 14 meses: (a) exclusivamente farmacolgico (TF), (b) exclusivamente comportamental (C), (c) tratamiento combinado (TC) (farmacolgico y comportamental); y (d) tratamiento comunitario (TCo). Los resultados halla- dos por dicho equipo, revelaron que todos los grupos de nios presentaron mejoras en la sintomatologa asocia- da al TDAH, al fnalizar los distintos tipos de tratamien- tos. No obstante, los nios que recibieron TF y TC, mos- traban mayores mejoras en la semiologa del trastorno. Posteriormente, este equipo de investigacin realiz un seguimiento longitudinal de los nios participantes del estudio, observando que, si bien las mejoras observa- das sobre el estado inicial (pre-tratamiento) persistan luego de 3 aos de haber realizado el mismo, las dife- rencias apreciadas respecto de la efectividad de las di- versas formas de abordaje teraputico, desaparecan luego de haber transcurrido dicho perodo temporal (Jensen et al., 2007). Finalmente, durante la adolescen- cia (8 aos despus de haber culminado el tratamiento), los infantes con TDAH tratados, mostraban un rendi- miento social, acadmico y emocional inferior al grupo control de nios sin TDAH (Molina et al., 2009). Respec- to de este hallazgo, los autores observaron que la se- miologa y las caractersticas del entorno social obser- vadas al inicio del trastorno (severidad de los sntomas, presencia de problemas de conducta, respuesta al tra- tamiento, nivel socio econmico), operaban como mejo- res predictores del desempeo social, acadmico y emocional del sujeto durante la adolescencia, que cual- quiera de las formas de tratamiento que haban recibido durante la infancia. En conjunto, estos resultados sea- laran la necesidad de desarrollar intervenciones efecti- 72 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA vas y sostenibles a lo largo del tiempo, focalizadas no solo en el alivio de los sntomas primarios del trastorno, sino en aquellas manifestaciones secundarias, cuya persistencia constituira un factor de riesgo para el de- sarrollo de patologas psiquitricas en la adolescencia y, posteriormente, en la adultez (trastornos del estado de nimo, adicciones, etc.) CONCLUSIN Si bien es limitado el nmero de estudios revisados en la presente ponencia, los mismos evidenciaran la im- portancia de un abordaje multimodal en el tratamiento del TDAH. Diversas formas de intervencin psicosocial, tales como, el entrenamiento conductual a padres y do- centes, la enseanza al infante de tcnicas de autorre- gulacin y autocontrol, han demostrado ser una alterna- tiva o un complemento fundamental, para el tratamiento farmacolgico del TDAH. Sumado a esto, la persisten- cia de la sintomatologa secundaria asociada a dicho trastorno a lo largo del desarrollo, y el riesgo que esta implica para el desarrollo de posteriores patologas en la adolescencia y la adultez, hacen necesaria la imple- mentacin de estudios longitudinales que a travs de abordajes teraputicos multimodales sostenidos en el tiempo, posibiliten tanto el alivio de los sntomas prima- rios como el adecuado desenvolvimiento social, afecti- vo y acadmico de los individuos. Consideramos que el diseo de programas teraputicos sobre TDAH, debe- ran situar como una de sus prioridades el alcance de dicha meta. REFERENCIAS Asociacin Americana de Psiquiatra. (2002) Manual diagnstico y estadstico de los trastornos mentales (DSM-IV-TR). Barcelona: Masson Cardo, E., Barcel, M.S., & Llobera, J. (2007) Estimacin de la prevalencia del trastorno por dfcit de atencin/hiperactividad en poblacin normal de la isla de Mallorca. Rev Neurol , 44, 10-4. 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Tales procesos, han sido asociados al control consciente del pensa- miento, comportamiento y afectividad, conforme al lo- gro de una meta (Carlson, 2005). De este modo, el fun- cionamiento ejecutivo (FE) estara vinculado al logro de comportamientos que implican tanto la inhibicin de pa- trones de respuestas automatizados, como la genera- cin de respuestas novedosas, moduladas por las con- tingencias presentes en el ambiente (Marcovitch, & Ze- lazo 2009). Este hecho, conduce a que los procesos ejecutivos sean claves para la correcta adaptacin del individuo a su ambiente. En lo referido al desarrollo de las EF, las mismas expe- rimentan una notoria maduracin posnatal. Las prime- ras manifestaciones de estas, emergen prximas al pri- mer ao de vida, no obstante, continan su desarrollo hasta la adultez (Zelazo, Craik, & Booth, 2004). Respec- to de esta afrmacin, es importante mencionar que los diferentes procesos considerados ejecutivos, eviden- ciaran curvas de desarrollo dismiles. Sin embargo, nu- merosos autores han sealado que durante el perodo preescolar, se produciran mejoras signifcativas en la performance de varios procesos considerados ejecuti- vos (Carlson, 2005; Marcovitch, & Zelazo, 2009). Este hecho, ha conducido a algunos investigadores a consi- derar que variaciones en la cualidad de la crianza du- rante este rango etario, podran infuir en el posterior desempeo ejecutivo (Berniere, Carlson & Whipple, 2010). En la presente ponencia, se realizar una revisin de di- versos trabajos que han considerado el vnculo entre cualidad de crianza y desarrollo ejecutivo en diferentes niveles de anlisis. El objetivo de tal revisin, es expo- ner el estado del arte de dicho tpico, contrastando los resultados hallados a travs de diversos diseos. ESTUDIOS COMPORTAMENTALES Landry, Miller-Loncar & Smith (2002) estudiaron la in- fuencia que ejerce la estimulacin verbal (EV) que las madres proporcionan a su descendencia a los 3 y 4 aos RESUMEN En los ltimos aos, ha emergido un notorio inters cientfco en el estudio del impacto que la cualidad de la crianza, presentara sobre el desarrollo de ciertos pro- cesos cognitivos denominados funciones ejecutivas. Tal inters, residira en la importancia que los mismos presentan, para la adecuada adaptacin del sujeto a su medio. Asimismo, el estudio de la interaccin entre am- bos constructos, recibira sustento en el marcado desa- rrollo posnatal que las funciones ejecutivas experimen- tan. Desde el paradigma de la neurociencia cognitiva del desarrollo, se ha postulado que la comprensin del vnculo entre ambas variables, demandara la conside- racin de diferentes niveles de anlisis en su estudio (gentico, molecular, anatmico, fsiolgico y comporta- mental). En la presente ponencia, se realizar una revi- sin de algunos de los principales trabajos que han abordado dicho vnculo, considerando tales niveles de anlisis. El objetivo que se persigue en la misma, es re- levar el estado del arte respecto de dicho tpico. Se concluir sealando algunos de los futuros interrogan- tes tericos a resolver respecto de dicho vnculo. Palabras clave Crianza Funciones Ejecutivas Infancia ABSTRACT IMPACT OF PARENTING IN COGNITIVE CONTROL DEVELOPMENT DURING CHILDHOOD In recent years, there has emerged a growing scientifc interesting in the study of parenting infuences on exec- utive functions development. Such interested would lie in the importance that they have, to the proper adapta- tion of individuals to their environment. Also, the study of the interaction between both constructs, would receive support by postnatal development of executive func- tions. Cognitive neuroscience developmental paradigm, postulated that understanding the relation between both variables, would require the consideration of different levels of analysis in their study (genetic, molecular, ana- tomical, physiological and behavioral). In this paper, well make a review of some works that have been ad- dressed this relation, considering such levels of analy- sis. The objective pursued in it, is to relieve the state of art on this topic. We will conclude by pointing out some future theoretical questions to resolve. Key words Parenting Executive Functions Childhood 74 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA de edad, sobre su posterior desempeo ejecutivo a los 6 aos de edad. Dado que las capacidades de lenguaje (L), memoria (M), y resolucin de problemas de carcter no verbal (NVPR), han sido consideradas como la base pa- ra el desarrollo ejecutivo, Landry, Miller-Loncar, Smith, & Swank (2002) evaluaron tambin el desempeo de los nios para tales habilidades, a los 3 y 4 aos de edad. Los resultados de estos estudios, mostraron que exista una relacin entre la EV proporcionada por las madres a los 3 aos de edad y la performance de los infantes en las capacidades de L y NVPR a los 4 aos de edad. Asi- mismo, exista una infuencia indirecta de la EV propor- cionada por las madres a los 3 aos de edad, sobre el posterior desempeo ejecutivo de los nios a los 6 aos, estando la misma mediada por el desarrollo de las capa- cidades de L y NVPR a los 4 aos. Conforme a tales re- sultados, dichos autores concluyeron que la EV en pero- dos crticos del desarrollo del lenguaje (3 aos de edad), facilitara el posterior desarrollo de habilidades cognitivas ms complejas (EF). Por otro lado, Bernnier, Carlson & Whipple (2010) inda- garon la relacin existente entre la cualidad de crianza parental los 12 y 15 meses de vida y el desempeo eje- cutivo de los infantes a los 18 y 26 meses. Tales auto- ras, consideraron en su estudio tres dimensiones del constructo crianza, denominadas respectivamente sensibilidad, soporte y mentalizacin. La dimensin sensibilidad, agrupaba las respuestas apropiadas y consistentes de los progenitores frente las seales del infante. Por otro lado, la dimensin soporte considera- ba la capacidad de los padres de respetar y apoyar las metas y elecciones de su descendencia; es decir, fo- mentar el desarrollo de la autonoma del infante. Final- mente, bajo la dimensin mentalizacin, se evaluaba la capacidad de los padres de utilizar conceptos menta- les en sus interacciones con el nio y de proporcionar herramientas de carcter verbal para regular su com- portamiento. Los resultados a los cuales arribaron di- chas autoras, evidenciaron que los nios cuyas madres presentaban puntaciones ms elevadas en la dimen- sin sensibilidad a los 12 meses, mostraban un mejor desempeo en las tareas de memoria de trabajo a los 18 meses. Asimismo, tales infantes presentaban un me- jor rendimiento en las tareas ejecutivas de resolucin de conficto a los 26 meses. Por otro lado, aquellas madres que presentaban puntuaciones ms elevadas en la di- mensin mentalizacin a los 12 meses, tenan infantes que evidenciaban una mejor performance en memoria de trabajo a los 18 meses. Sumado a esto, tales nios mostraban un mejor desempeo en tareas de conficto y control inhibitorio a los 26 meses. No obstante, este ltimo vnculo no se sostuvo al controlar el efecto del desarrollo intelectual del nio. Finalmente, los infantes cuyas madres presentaban puntuaciones ms elevadas en la dimensin soporte a los 15 meses, tenan un me- jor rendimiento en las pruebas de memoria de trabajo y categorizacin a los 18 meses, y en las pruebas de con- ficto ejecutivo a los 26 meses. Tales resultados, sea- laran que el impacto de la crianza sobre el desempeo ejecutivo del nio, podra variar en funcin de la edad del infante y la tarea de control cognitivo considerada. Asimismo, diversos estudios previos han arribado a re- sultados congruentes con la hiptesis anterior (Bibok, 2007; Dilworth-Bart et al., 2010; Dilworth-Bart et al., 2009; Hughes, & Ensor, 2005; Landry et al., 2000). Trabajos que integran mltiples niveles de anlisis En la actualidad, es limitado el nmero de trabajos que consideran diversos niveles de anlisis, en el estudio de la relacin entre crianza y desarrollo ejecutivo en pobla- ciones de infantes sanos. No obstante, numerosos au- tores han analizado el vnculo entre constitucin genti- ca, cualidad de crianza y desarrollo ejecutivo del infan- te, en muestras de nios con trastornos psicopatolgi- cos o de conducta asociados a dfcits en tales proce- sos (Nikolas, Friderici, Waldman, Jernigan, & Nigg, 2010; Sonuga-Barke et al., 2008; Stevens, Kumsta, Kre- ppner, Brookes, Rutter, & Sonuga-Barke, 2009). Dado que la performance ejecutiva ha sido vinculada princi- palmente a la actividad de sistemas de neurotransmi- sin dopaminrgicos, un nmero signifcativo de estu- dios, se ha focalizado en el anlisis de la interaccin en- tre variaciones genticas asociadas a la actividad de tal sistema, la cualidad de crianza y el output cognitivo- comportamental resultante. Un ejemplo paradigmtico de tales trabajos, es el estudio realizado por Voelker et al. (2009). Tales autores, examinaron la relacin exis- tente entre variaciones haplotpicas del gen COMT -gen involucrado en la degradacin de la dopamina-, la cua- lidad de crianza parental el desempeo de nios de 2 aos de edad en tareas atencionales de secuenciacin visual. Los resultados de tal estudio, revelaron que la presencia de determinados haplotipos (haplotipos agru- pados como de bajo dolor), presentaban un mejor ren- dimiento atencional, slo cuando dicho grupo se hallaba vinculado a una elevada cualidad de crianza. Por otro lado, Sheese et al. (2007) analizaron el impac- to de la cualidad de crianza, en determinados genotipos infantiles, sobre el posible desarrollo de ADHD y el ras- go de personalidad denominado buscador de sensa- ciones. Dichos autores, establecieron los genotipos de los nios para una serie de genes, incluyendo el gen in- volucrado en la codifcacin del receptor dopaminrgico DRD4. Dicho gen, habra sido relacionado con el ADHD y el rasgo de personalidad denominado buscador de sensaciones. Sheese (2007) hall que la expresin a nivel comportamental de nios con un genotipo con el alelo 7 repetido, variaba en funcin del patrn de crian- za de los padres. Especfcamente, se observ que los padres clasifcados con una elevada calidad de crianza - si bien tenan hijos que evidenciaban caractersticas temperamentales del rasgo buscador de sensaciones - las puntuaciones de estos nios para dicho rasgo eran inferiores a la de los hijos de padres con puntuaciones bajas en calidad de crianza. Estos ltimos, presenta- ban puntuaciones elevadas para dicho rasgo. Finalmen- te, los nios sin el alelo 7 repetido, no mostraban una in- fuencia de la variable crianza parental sobre las pun- tuaciones para el rasgo buscador de sensaciones. De este modo, los resultados arrojados por ambos estudios (Shesee et al., 2007; Voelker et al., 2009) evidenciaron que la interaccin entre cualidad de crianza y constitu- 75 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA cin gentica, desempeara un importante papel en el desarrollo de la atencin (Voelker et. al., 2009) y de la capacidad de autorregulacin (Shesee et. al., 2007). Desde otra perspectiva, Hane & Fox (2006) hallaron que variaciones en la cualidad de crianza de dadas ma- dre-nio, se hallaban asociadas tanto a patrones asim- tricos de actividad electroencefalogrfca frontal, como a diferentes tipos de manifestaciones a nivel comporta- mental en el infante. Especfcamente, tales autoras ha- llaron que los infantes cuyas madres evidenciaban una baja cualidad en la crianza, mostraban una mayor asi- metra frontal derecha positiva, que aquellos infantes que reciban una elevada cualidad de crianza. Asimis- mo, el primer grupo de nios mencionado, presentaba una mayor respuesta de miedo, menores puntuaciones en atencin positiva compartida con sus madres y ma- nifestaciones ms elevadas de afecto negativo durante la interaccin con sus progenitoras. En funcin de tales resultados, estas autoras concluyeron que variaciones en la cualidad de crianza, infuiran en la actividad de sistemas neuronales especfcos vinculados a la regula- cin del comportamiento. CONCLUSIN Diversos estudios han revelado la existencia de un vn- culo entre cualidad de crianza y desarrollo de las EF du- rante la infancia. No obstante, an no existe evidencia cientfca contundente, respecto de los mecanismos que subyaceran a dicha relacin. Si bien el estudio de la vinculacin entre ambos constructos ha sido realiza- do considerando diversos niveles de anlisis; existe una mayor proporcin de trabajos que se han focalizado ex- clusivamente en registros comportamentales. Asimis- mo, aquellos proyectos que integran otros niveles de anlisis (gentico, anatmico-funcional) han sido efec- tuados predominantemente en infantes con determina- das patologas (Nikolas, Friderici, Waldman, Jernigan, & Nigg, 2010; Sonuga-Barke et al., 2008; Stevens, Kums- ta, Kreppner, Brookes, Rutter, & Sonuga-Barke, 2009). Este hecho difculta la posibilidad de extraer conclusio- nes exhaustivas respecto de los posibles mecanismos que subyaceran a la relacin entre ambos constructos. Algunos autores han postulado que el vnculo entre am- bas variables estara mediado por fenmenos de plasti- cidad dependientes de la experiencia (Carlson, 2009). Asimismo, tal plasticidad se encontrara limitada por el patrn de confguracin genotpica del nio (Chiappedi, Balottin, Baschenis, Piazza, De Bernardi, & Bejor, 2010). No obstante, estas hiptesis provienen principal- mente de estudios realizados con modelos animales o sujetos humanos adultos con diagnstico psiquitrico (Chugani, Behen, Muzik, Juhasz, Nagy, & Chugani, 2001; Francis, & Meaney, 1999; Loman & Gummar, 2009; Marshall, & Fox, 2004). Por tal motivo, considera- mos necesario ampliar el nmero de trabajos que anali- cen el vnculo entre crianza y desarrollo de EF en dife- rentes niveles de anlisis. Tales estudios permitiran al- canzar una comprensin ms precisa de los posibles mecanismos subyacentes a la interaccin entre ambos constructos durante el desarrollo. REFERENCIAS Bernier, A., Carlson, S.M., & Whipple, N. (2010) From External Regulation to Self-Regulation: Early Parenting Precursors of Young Childrens Executive Functioning, Child Development, 81 (1), 326- 339 Bibok, M. (2007) Social interactive quality of parent child scaffolding as a predictor of childrens executive functions. Simon Fraser University Library: Canada. Carlson, S.M. 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Conclusion: Several authors have reported a steady decrease in the recognition of negative basic emotions with age, espe- cially fear, anger and sadness (Moreno et al., 1993, Sul- livan and Ruffman, 2004). Our fndings are consistent with the literature, and have been linked to structural and functional changes of aging (Calder et al., 2003; Gunning-Dixon, 2001) Key words Aging Recognition basic emotions INTRODUCCIN Las emociones primarias o bsicas son un pequeo grupo de estados emocionales determinados biolgica- mente, presente en varias especies, de expresin uni- versal e innata (LeDoux, 1999; Ekman, 1999). Alegra, tristeza, enojo, miedo e ira son las que parecen haber recibido mayor acuerdo. Damasio (2005) entiende las emociones como conduc- tas bsicas tendientes a mantener la homeostasis de un organismo, tenga este cerebro o no. Para las emocio- nes bsicas, las circunstancias que causan estas emo- ciones y los patrones de comportamiento correspon- dientes a cada una son muy constantes en diferentes especies y culturas. Se manifestan de forma constante en todas las personas ya que la musculatura facial acti- vada es prcticamente la misma para el estmulo que activa de forma caracterstica esa emocin(LeDoux, 1999; Ekman, 1999) La herramienta ms utilizada en la evaluacin de la per- cepcin de emociones parece ser el set Pictures Of Fa- cial Affect (POFA) (Ekman y Friesen, 1976). El mismo est compuesto por 110 fotografas de 14 personas que expresan seis emociones bsicas - alegra, tristeza, enojo, asco, miedo y sorpresa - ms una fotografa de cada uno en pose neutra. El set cuenta con normas que muestran el porcentaje de acuerdo de un pequeo grupo de estudiantes universitarios norteamericanos en el reconocimiento de la emocin expresada para cada fotografa. Al no contar con tareas especfcas, la mayo- ra de los autores ha seleccionado un nmero variable de fotografas para emplearlas mayormente en tareas de denominacin (Phillips et al., 2002; Keane et al., 2002; Corden et al., 2006) Surge entonces la necesidad de una batera ms com- RESUMEN Las emociones bsicas son un pequeo grupo de esta- dos emocionales determinados biolgicamente, pre- sente en varias especies, de expresin universal e inna- ta (LeDoux, 1999; Ekman, 1999). Objetivo: Evaluar el reconocimiento facial de emociones bsicas en una po- blacin normal de adultos mayores. Instrumentos: Se seleccionaron 60 fotografas del POFA (Ekman y Frie- sen, 1976), en base al trabajo de Calder et al. (1996). Se armaron tres tareas, de 60 lminas cada una, 10 por emocin bsica, Seleccin, Apareamiento y Denomina- cin. Muestra: La muestra est integrada por 18 adultos mayores, alfabetizados, 10 hombres y 20 mujeres de 74,37 7,48 aos de edad y 8,93 3,17 aos de esco- laridad, MMSE 27,81 1,5. Resultados: Medias de ren- dimiento: Seleccin 51,47 5,49; Apareamiento 44,47 5,84; Denominacin 47,00 7,01. Se encontr correla- cin signifcativa entre las tres tareas. Se observ una diferencia estadsticamente signifcativa con mayores difcultades en el reconocimiento de miedo y enojo (p=0,001) Conclusin: Varios autores han reportado una disminucin progresiva en el reconocimiento de emociones bsicas negativas con el envejecimiento, especialmente para miedo, enojo y tristeza (Moreno et al., 1993; Sullivan y Ruffman, 2004). Nuestros hallazgos estn en consonancia con la literatura, y han sido vincu- lados a cambios estructurales y funcionales del enveje- cimiento (Calder et al., 2003; Gunning-Dixon, 2001) Palabras clave Envejecimiento Reconocimiento emociones bsicas ABSTRACT FACE RECOGNITION EVALUATION OF BASIC EMOTIONS IN OLDER ADULTS Summary: Basic emotions are a small group of biologi- cally determined emotional states, present in several species, expression of universal and innate (LeDoux, 1999; Ekman, 1999). Objective: To evaluate the facial recognition of basic emotions in a normal population of older adults. Instruments: A total of 60 photographs of POFA (Ekman and Friesen, 1976), were selected based on the work of Calder et al. (1996). Three tasks were as- sembled, 60 slides each, 10 for basic emotion: Selec- cin, Apareamiento y Denominacin. Sample: The sam- ple consists of 18 seniors, literate, 10 men and 20 wom- en from 74.37 7.48 years old and 8.93 3.17 years of schooling, MMSE 27.81 1.5. Results: Average Per- formance: Seleccin 51.47 5.49; Apareamiento 44.47 5.84; Denominacin 47.00 7.01. Signifcant correla- 78 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA pleta, integrada por distintas tareas, para la evaluacin del reconocimiento facial de emociones bsicas Objetivo: Evaluar el reconocimiento facial de emociones bsicas en una poblacin normal de adultos mayores. METODOLOGA Instrumentos Se seleccionaron 60 fotografas del POFA (Ekman y Friesen, 1976), en base al trabajo de Calder et al. (1996). Se armaron tres tareas, de 60 lminas cada una, 10 por emocin bsica. Seleccin: se presentan 6 fotografas por lmina, una por cada emocin bsica. El sujeto debe sealar entre cinco distractores la emo- cin indicada verbalmente por el examinador. Apareamiento: se presentan 7 fotografas por lmina, una por cada emocin bsica, excepto para la emocin blanco que se repite en la fotografa de la izquierda. El sujeto debe aparear cada fotografa de la izquierda con aquella que exprese la misma emocin. Denominacin: se presenta una fotografa por lmina, acompaada de seis etiquetas que denominan los esta- dos emocionales bsicos. El examinado debe seleccio- nar la etiqueta con el nombre de la emocin expresada en cada fotografa. Para las tareas Seleccin y Apareamiento las fotogra- fas fueron randomizadas de forma tal que haya de dos a tres fotos masculinas y no quede en el mismo slide la misma persona expresando distintos estados emocio- nales. Todas las tareas cuentan con dos tems de prue- ba. El orden de administracin de las pruebas corres- ponde con el orden descripto ms arriba. Poblacin La muestra est integrada por 18 adultos mayores, alfa- betizados, 10 hombres y 20 mujeres de 74,37 7,48 aos de edad y 8,93 3,17 aos de escolaridad, MMSE 27,81 1,5. Los criterios de exclusin de la muestra son anteceden- tes de enfermedades neurolgicas y psiquitricas, re- traso mental, y un rendimiento inferior a 24 puntos en el Mini Mental State Examination9. RESULTADOS La media de rendimiento para la tarea Seleccin fue de 51,47 con un desvo estndar de 5,49; la media de ren- dimiento para la tarea Apareamiento fue de 44,47 con un desvo estndar de 5,84; la media de rendimiento pa- ra la tarea Denominacin es de 47,00 con un desvo es- tndar de 7,01. Se encontr correlacin signifcativa en- tre las tres tareas. Se observ una diferencia estadsticamente signifcati- va con mayores difcultades en el reconocimiento de miedo y enojo (p0,001) CONCLUSIN Si bien la utilidad del set POFA radica en la posibilidad de servirse de cualquiera de los estmulos segn el in- ters del investigador, replicar estudios previos o llevar a cabo una evaluacin neuropsicolgica del reconoci- miento facial de emociones bsicas en poblaciones es- pecfcas se vuelve difcil debido a la ausencia de crite- rios comunes para la seleccin de las fotografas y para el armado de tareas. Varios autores han reportado una disminucin progresi- va en el reconocimiento de emociones bsicas negati- vas con el envejecimiento, especialmente para miedo, enojo y tristeza (Moreno et al., 1993; Sullivan y Ruff- man, 2004). Nuestros hallazgos estn en consonancia con la literatura, y han sido vinculados a cambios es- tructurales y funcionales del envejecimiento (Calder et al., 2003; Gunning-Dixon, 2001) BIBLIOGRAFA Calder, A. J.; Keane, J.; Manly, T.; Sprengelmeyer, R.; Scott, S.; Nimmo-Smith, I.; Young, A. (2003); Facial expression recognition across the adult life span. Neuropsychologia; 41: 195-202. Calder, A.J.; Young, A. W.; Rowland, D.; Perrett, D. I.; Hodges, J.R.; Etcoff, N. L. (1996): Facial emotion recognition after bilateral amygdala damage: differentially severe impairment of fear. Cog- nitive Neuropsychology; 13 (5) pgs. 699-745. Corden, B.; Critchley, H.; Skuse, D.; Dolan, R. 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Moreno, C.; Borod, J.C.; Welkowitz, J.; Alpert, M. (1993): The perception of facial emotion across the adult life-span. Dev Neu- ropsychol, 9: 305-14. Phillips, L.; MacLean, R.; Allen, R. (2002): Age and the Unders- tanding of Emotions: Neuropsychological and Sociocognitive Perspectives. Journal of Gerontology: PSYCHOLOGICAL SCIEN- CES, Vol. 57B, No. 6, pg. 526-530. Sullivan, S.; Ruffman, T. (2004): Emotion recognition defcits in the elderly. Int J Neurosci; 114: 403-32. POSTERS 81 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA PROCESAMIENTO DE LA INFORMACIN EN NIOS CON ALTO Y BAJO ESTRS PERCIBIDO Carrizo, Analia Beatriz; Paez, Amelia Elizabeth; Zanin, Laura Ana; Azpiroz, Rosana; De Bortoli, Miguel Angel Facultad de Ciencias Humanas, Universidad Nacional de San Luis. Argentina. ly basis would present lower performance in the se- quential mental processing, affecting general cognitive performance. Key words Stress Mental processing INTRODUCCIN Recientemente ha surgido un inters especial por el es- tudio del estrs en nios, ya que en muchos casos, se han sustrado conclusiones a partir de estudios en adul- tos aplicables a la niez. Los acontecimientos estresan- tes que experimentan con mayor frecuencia los nios, se agrupan en tres grandes reas del funcionamiento infantil: familiar, social y escolar (Oros y Vogel, 2005). Cuando el comportamiento de un nio se torna difcil, es posible que est respondiendo a circunstancias am- bientales que desbordan su capacidad de adaptacin afectando su crecimiento y desarrollo (Canalda y Car- bons, 2005). En relacin al desempeo cognitivo ma- nifestado por nios en situaciones de estrs, la literatu- ra actual converge en que los procesos cognitivos pue- den verse afectados en diferentes grados. Especfca- mente, el estrs prolongado altera la memoria, tanto la memoria a largo plazo como la memoria operativa. El estrs crnico modifcara la potenciacin a largo plazo en el hipocampo debido a la accin constante de los glucocorticoides aumentados. Una situacin estresante crnica afecta negativamente las redes neuronales, de- bilitndolas y menguando las conexiones interneurona- les (Pruessner et al., 2008). MTODO Muestra: 53 nios (62% varones) escolarizados con un rango de edad entre 8 y 13 aos (Media=10,52; DE=1,36) de la ciudad de San Luis. Criterios de exclusin: nios repitentes y los que hayan padecido enfermedades de repercusin general o que afecte la cognicin. Instrumentos Se utiliz el Inventario Infantil de Estresores Cotidianos (Trianes, Mena, Fernndez, Escobar, Maldonado y Mu- oz, 2009) y la Batera de Evaluacin de Kaufman para nios (K-ABC, Kaufman y Kaufman, 1983), estandariza- do en San Luis por Taborda y Barbenza (2005), para evaluar el procesamiento de la informacin. Se adminis- traron ocho pruebas (3 de procesamiento secuencial y RESUMEN El objetivo del presente estudio fue evaluar las relacio- nes entre la percepcin de estrs diario y el procesa- miento de la informacin en nios escolarizados de edades entre 8 y 13 aos (M=10,52; DE=1,36). Se utili- zaron el Inventario Infantil de Estresores Cotidianos (Trianes et al., 2009) y la Batera de Evaluacin de Kau- fman para nios (K-ABC. Kaufman y Kaufman, 1983), estandarizado en San Luis por Taborda y Barbenza (2005). Los participantes fueron clasifcados en funcin del nivel de percepcin de estrs cotidiano: bajo (PEB, nivel medio=7,8; n=10) o alto (PEA, nivel medio=19,9; n=10). Resultados: Al comparar el procesamiento de la informacin evaluado con el K-ABC, los nios del grupo PEA presentaron menor desempeo en las pruebas de repeticin de nmeros y orden de palabras del procesa- miento secuencial respecto de los del grupo PEB (am- bos p=0,05). Los resultados reportados coinciden con estudios actuales sobre los efectos negativos del estrs en el rendimiento cognitivo de nios. En conclusin, los nios que perciben mayor estrs de manera cotidiana presentaran menor desempeo en el procesamiento de la informacin secuencial, afectando el rendimiento cognitivo en general. Palabras clave Estrs Procesamiento de informacin ABSTRACT MENTAL PROCESSING IN CHILDREN WITH HIGH AND LOW SELF-PERCEIVED STRESS The purpose of this study was to evaluate relations be- tween daily self-perceived stress and mental process- ing in schooled children between 8 and 13 years of age (Mean=11.16; SD=1.23). The Childrens Inventory for Daily Stressors (Trianes et al., 2009) and the Kaufman Evaluation Battery for Children (K-ABC. Kaufman and Kaufman, 1983) standardized in San Luis by Taborda and Barbenza (2005) were applied. Participants were classifed according to the daily stress perception: low (LSP, medium level=7,8; n=10) or high (HSP, medium level=19,9; n=10). Results: When comparing the mental processing evaluated by the K-ABC, children of the HSP group showed lower performance in number repetition and word order of the sequential processing tests in comparison with those of LSP group (both p=0,05). Re- ported results match current studies of the negative ef- fects of stress on childrens cognitive performance. In conclusion, children that perceive more stress on a dai- 82 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA 5 de procesamiento simultneo). Se utiliz balanza digi- tal para determinar el peso corporal (PC) y centmetro inextensible rgido para medir la talla, y fexible para me- dir circunferencia ceflica (CC). Con el software DAX (diagnstico auxolgico y nutricional) de Zona Peditri- ca (2004), se calcularon el ndice de masa corporal (IMC) y puntajes Z. Procedimiento Se solicit el consentimiento informado escrito a los pa- dres de los nios que participaran en el estudio. A par- tir de la muestra total, se conformaron dos grupos de ni- os en funcin del nivel de percepcin de estrs cotidia- no: bajo estrs percibido (PEB) o alto estrs percibido (PEA). Se aplicaron las pruebas t y u de Mann-Whitney para comparar las medias en el procesamiento de la in- formacin de ambos grupos. RESULTADOS El grupo PEB present un puntaje medio de estrs de 7,8 (DE= 1,22). Las reas generadoras de estrs mos- traron los siguientes valores medios: familia: 3,70; sa- lud: 2,40 y escuela: 1,70. Los nios con PEA obtuvieron un puntaje medio de es- trs de 19,9 (DE= 2,18), manifestando las siguientes fuentes de estrs en orden decreciente: salud (M= 8,20), familia (M=8) y escuela (M= 3,70). Las medidas antropomtricas determinadas en ambos grupos se presentan en siguiente tabla: Grupo Mnimo Mximo Media DE PC (Kg) PEB 26 28,900 70,100 51,400 39,650 39,56 13,93 7,77 PEA Talla (cm) PEB 104 133 159 159 142 144,85 17,82 9,32 PEA CC (cm) PEB 53 53 72 56 57,50 54,10 6,11 0, 99 PEA IMC PEB 14,27 0,19 27,73 22,42 18,10 16,77 4,35 6,18 PEA Al comparar el procesamiento de la informacin evalua- do con el K-ABC, los nios del grupo PEA presentaron menor desempeo en las pruebas de repeticin de n- meros y orden de palabras del procesamiento secuen- cial respecto de los de los nios del grupo PEB (p=0,05 para ambas pruebas). No se hallaron diferencias signif- cativas entre los grupos en las restantes pruebas del K- ABC. Ni tampoco se encontraron diferencias signifcati- vas en las medidas antropomtricas. DISCUSIN De los resultados es posible inferir que los nios que perciben mayor estrs de manera cotidiana presentan menor desempeo en el procesamiento de la informa- cin secuencial. Autores como Maldonado, Fernndez, Trianes, Wes- nes, Petrini y Zangara (2008) evaluaron los efectos de la percepcin de estrs diario sobre el rendimiento cog- nitivo en nios, encontrando que los ms estresados mostraban un menor nivel en la velocidad de memoria y continuidad de atencin respecto de los nios con baja percepcin de estrs diario. Es decir, que percibir ma- yor estrs de manera cotidiana puede disminuir el ren- dimiento cognitivo en general. En nuestro trabajo los re- sultados fueron similares, lo que revelara que la expo- sicin a distintas fuentes de estrs afectara funciones cognitivas como la memoria a corto plazo y la atencin. En este sentido, Adam, Klimes-Dougan y Gunnar, 2006; Pruessner et al., 2008 especifcan que el estrs prolon- gado altera la memoria a largo plazo y la memoria ope- rativa, as la capacidad de procesamiento de informa- cin concurrente disminuye debido a la demanda que supone la situacin de estrs, por lo que el rendimiento cognitivo se ve afectado (Elzinga y Roelofs, 2005). BIBLIOGRAFA Canalda, G. y Carbons, J. (2005). Acontecimientos vitales. En L. Ezpeleta (Ed.), Factores de riesgo en psicopatologa del desa- rrollo (pp. 337-358). Barcelona: Masson. Kaufman A. y Kaufman N. (1997). Test Breve de inteligencia de Kaufman. Madrid: TEA. Maldonado, E., Fernndez, F., Trianes, M., Wesnes, K., Petrini, O, Zangara, A., Enguix, A. y Ambrosetti, L. (2008). Cognitive perfor- mance and morning levels of salivary cortisol and a-amylase in children reporting high vs. low daily stress perception. The Spanish Journal of Psychology, 11, 3-15. Oro, L. y Vogel, G. (2005). Eventos que generan estrs en la in- fancia: diferencias por sexo y edad; Enfoques, 17(1), 85-101. Pruessner, J., Dedovic, K., Khalili -Mahani, N., Engert, V., Pruessner, M., Buss, C., Renwick, R., Dagher, A., Meaney, M. y Lupien, S. (2008). Deactivation of the limbic system during acute Psychosocial Stress: evidence from positron emission tomography and functional magnetic resonance imaging studies; Biological Psychiatry, 63, 234-240. Taborda, A. y Barbenza, C. (2005). Baremizacin de la batera K-ABC de Kaufman en la poblacin infantil de San Luis, Argentina. Manuscrito no publicado. Trianes, M., Mena, M., Fernndez, F., Escobar, M., Maldonado, E., y Muoz, A. (2009). Evaluacin del estrs infantil: Inventario Infantil de Estresores Cotidianos (IIEC), 21 (4), pp. 598-603. Zona Peditrica. (2004). Programa computarizado de diagnstico auxolgico y nutricional. Recuperado de www.zonapediatrica.com 83 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA ANLISIS DEL DESEMPEO DE POBLACIN NORMAL EN UNA BATERA COGNITIVA DE EVALUACIN DE PRAXIAS Gmez, Pablo Guillermo; Politis, Daniel Hospital Interzonal General de Agudos Eva Pern, San Martn, Provincia de Buenos Aires - Consejo Nacional de Investigaciones Cientfcas y Tcnicas. Argentina of high and low education, were differences in produc- tion, comprehension and gestural imitation testing, and in action semantics. Conclusions Age and education are factors that affect praxic performance. The differences found in normal people encourage the development of standards that take into account the age and education of patients when assessing their performance. Key words Apraxia Cognitive assessment Neuropsychology Control group INTRODUCCIN La apraxia se defne clnicamente como la difcultad o la incapacidad de efectuar movimientos hbiles aprendi- dos (De Renzi, 1989). Es uno de los dfcits suscepti- bles a presentarse en cuadros demenciales, siendo es- pecialmente asociado a enfermedades degenerativas como la enfermedad de Alzheimer (Buxbaum et al., 2008). La batera de evaluacin cognitiva de praxias (Politis, 2003) se ha mostrado capaz de detectar apraxia en poblacin clnica, mas an no se ha estudiando en detalle la incidencia del sexo, la edad o la escolaridad en el desempeo en la batera de praxias. Puesto que la apraxia tiene un impacto importante en la calidad de vi- da (Geusgens, 2007), se muestra til el anlisis de las variables que pueden afectar el desempeo prxico. OBJETIVO Estudiar el rendimiento de controles normales en una batera cognitiva de evaluacin de praxias (Politis, 2003), valorando los efectos del sexo, la edad y la esco- laridad. MATERIAL Y METODO Participantes Se evalu el desempeo de 36 controles normales, siendo el 70% mujeres y el restante 30% hombres. El promedio de edad de la muestra fue de 63,8 aos (DE 8,3), con 11,2 aos (DE 3,9) de escolaridad formal pro- medio. Los controles normales rindieron por encima de su puntaje de corte en el MMSE. Para su anlisis, la muestra se dividi en mitades to- mando como referencia la edad de los sujetos, agru- pndolos en adultos jvenes (menores de 65 aos) o adultos mayores (65 aos o ms); y considerando el ni- vel de escolaridad, agrupndolos en baja escolaridad RESUMEN Introduccin La apraxia se defne clnicamente como la difcultad o la incapacidad de efectuar movimientos hbi- les aprendidos, siendo uno de los dfcits susceptibles a presentarse en cuadros demenciales. Objetivo Estudiar el rendimiento de controles normales en una batera cog- nitiva de evaluacin de praxias, valorando los efectos del sexo, la edad y la escolaridad. Mtodo Se evalu el des- empeo de 36 controles normales en la batera de praxias, siendo el 70% mujeres y el restante 30% hom- bres. El promedio de edad de la muestra fue de 63,8 aos (DE 8,3), con 11,2 aos (DE 3,9) de escolaridad for- mal promedio. Resultados No se hallaron diferencias en relacin al sexo de los examinados. No obstante, se ha- llaron diferencias signifcativas al comparar diferentes grupos etarios en tareas de produccin y comprensin gestual, y semntica de accin. Asimismo, al comparar grupos de alta y baja escolaridad se hallaron diferencias en pruebas de produccin, comprensin e imitacin ges- tual, y semntica de accin. Conclusiones La edad y la escolaridad se presentan como factores que inciden en el rendimiento prxico. Las diferencias halladas en po- blacin normal alientan al desarrollo de normas que con- sideren la edad y la escolaridad de los pacientes al mo- mento de valorar su desempeo. Palabras clave Apraxia Evaluacin cognitiva Neuropsicolgia Grupo control ABSTRACT ANALYSIS OF NORMAL POPULATION PERFORMANCE ON COGNITIVE APRAXIA ASSESSMENT BATTERY Introduction Apraxia is clinically defned as diffculty or inability to perform learned skilled movements (De Ren- zi, 1989), and its one of the defcits that frequently ap- pear in dementia. Objective Study the performance of normal controls on a battery of cognitive assessment of praxis (Politis, 2003), assessing the effects of sex, age and schooling. Method We evaluated the performance of 36 normal controls in the praxis battery (70% female, 30% male). The average age of the sample was 63.8 years (SD 8.3), with 11.2 years (SD 3.9) of formal school- ing on average. Results There were no differences re- garding sex of the examinees. However, signifcant dif- ferences were found when comparing different age groups in production and comprehension gesture tasks, and in action semantics. Also, when comparing groups 84 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA (hasta secundario incompleto) o alta escolaridad (se- cundario completo en adelante) Instrumentos Se administr a los controles una batera cognitiva de evaluacin de praxias (Politis, 2003). La batera de praxias toma como referencia el modelo cognitivo de procesamiento de praxias de Gonzlez Rothi et al. (1991, 1997) e incluye la evaluacin del uso de herra- mientas; la produccin, imitacin y comprensin de gestos; y el sistema semntico de accin. RESULTADOS No se hallaron diferencias en relacin al sexo de los examinados. No obstante, se hallaron diferencias signi- fcativas al comparar diferentes grupos etarios en ta- reas de produccin y comprensin gestual, as como en pruebas de semntica de accin. Asimismo, al compa- rar grupos de alta y baja escolaridad se hallaron dife- rencias en pruebas de produccin, comprensin e imi- tacin gestual, y semntica de accin. CONCLUSIONES La edad y el nivel de escolaridad se presentan como factores que inciden en el rendimiento prxico. Las dife- rencias halladas en poblacin normal alientan al desa- rrollo de normas que tengan en cuenta la edad y la es- colaridad de los pacientes al momento de valorar su desempeo con vistas a elevar la sensibilidad y la espe- cifcidad de la batera al dfcit prxico. Agradecimientos Este trabajo fue realizado en el marco de los subsidios UBACyT P037 y CONICET PIP 112-200801-00633. BIBLIOGRAFA 1) De Renzi, E. (1989). Apraxia. En: F. Boller, J. Grafman (Eds.). Handbook of neuropsychology, Vol. 2. Amsterdam: Elsevier. pp 245-63. 2) Buxbaum, L. J., Haaland, K. Y., Hallett, M., Wheaton, L., Heilman, K. M., Rodriguez, A., Gonzalez Rothi, L. J. (2008). Treatment of Limb Apraxia: Moving Forward to Improved Action. American Journal of Physical Medicine and Rehabilitation, 87(5), 424. 3) Politis, D. (2003). Nuevas perspectivas en la evaluacin de las apraxias. Tesis doctoral para la obtencin del ttulo de Doctor en Medicina, Facultad de Medicina, Universidad de Buenos Aires, Buenos Aires. 4) Geusgens, C. A. V. (2007) Transfer of cognitive strategy training after stroke: No place like home? Doctoral Thesis, Maastricht University, Maastricht. 5) Gonzlez Rothi, L. J., Ochipa, C., Heilman, K. M. (1991). A cognitive neuropsychological model of limb praxis. Cognitive Neurupsychology, 8(6), 443-458. 6) Gonzlez Rothi, L. J., Ochipa, C., Heilman, K. M. (1997). Apraxia, the neuropsychology of action. UK: Ed Psychological Press. 85 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA AVANCES EN LA COMPRENSIN DE LA RELACIN ENTRE COGNICIN LGICA Y PERSONALIDAD Macbeth, Guillermo; Britos, Paola; Grigera, Diana; Razumiejczyk, Eugenia Consejo Nacional de Investigaciones Cientfcas y Tcnicas. Argentina Las dos corrientes fundamentales de investigacin que conforman el estado actual de los conocimientos en psi- cologa del pensamiento (Santamara, 1995), esto es, las teoras sintcticas y las teoras semnticas, han re- conocido la importancia de las leyes formales atribuidas a Augustus DeMorgan (Rips, 2011). Estas leyes lgicas (DeMorgan, 1847; Muoz Garca, 2005; Suppes & Hill, 1992) afrman la equivalencia entre: (i) la negacin de una conjuncin de tipo [no (p y q)] y la disyuncin com- puesta por las proposiciones negadas, es decir, (no p o no q) y; (ii) la negacin de una disyuncin de tipo [no (p o q)] y la conjuncin compuesta por las proposiciones negadas, es decir, (no p y no q). El reconocimiento intui- tivo de estas equivalencias se ha investigado slo de manera indirecta (Macbeth, Razumiejczyk & Fernn- dez, 2010; Rader & Sloutsky, 1991). Desde un enfoque sintctico, los estudios de Rips (1994, 2011) sobre la psicologa de la demostracin incluyen las leyes de De- Morgan como un caso de lgica natural o espontnea (Braine, 1978; Fernndez Berrocal & Carretero, 1995; Martn & Valia, 2002), aunque no se ofrece evidencia experimental para tal hiptesis. Desde el enfoque se- mntico (Garca Madruga, Gutirrez, Carriedo, Moreno & Johnson-Laird, 2001; Johnson-Laird, 1983; Johnson- Laird, Byrne & Schaeken, 1994), la teora de los mode- los mentales ha encontrado que las disyunciones resul- tan ms difciles que las conjunciones en tareas de re- conocimiento (Carriedo, Moreno, Gutirrez & Garca Madruga, 1998; Garca Madruga et al., 2001; Richard- son & Ermerod, 1997). En estudios cognitivos recientes sobre psicologa del pensamiento se ha encontrado que la personalidad es relevante para predecir el rendimien- to en tareas lgicas (Macbeth, Lpez Alonso, Razumie- jczyk, Sosa, Pereyra & Fernndez, 2009; Macbeth, Ra- zumiejczyk & Adrover, en prensa). El propsito de este trabajo de revisin es recopilar y or- ganizar los resultados acumulados acerca de la rela- cin entre personalidad y cognicin lgica de las leyes de DeMorgan. Se ha encontrado al respecto que los es- tudios de Fumero, Santamara & Johnson-Laird (2010) sugieren que el neuroticismo y la introversin se relacio- nan de manera signifcativa con tareas silogsticas que incluyen contenidos semnticos afnes con tales rasgos de personalidad. Esta relacin se encontr para razo- namientos de tipo modus ponens y modus tollens. En un sentido similar se ha encontrado en otro estudio re- ciente que la calidad de la introspeccin (Macbeth, Ra- zumiejczyk & Campitelli, 2011), la autoestima y la nece- sidad de cognicin (Macbeth et al., en prensa), entendi- dos como rasgos de personalidad, se relacionan de ma- RESUMEN Se propone una revisin de los avances recientes rela- tivos a la comprensin de la relacin entre personalidad y cognicin lgica. Se analiza el caso particular de las leyes de DeMorgan. Se describen hallazgos previos que relacionan la cognicin de estas leyes con factores de personalidad tales como la introversin, el neuroti- cismo, la autoestima, la introspeccin y la necesidad de cognicin. Se recomienda realizar nuevos estudios de rplica y ampliar la evaluacin a otros factores funda- mentales de la personalidad tales como los incluidos en el inventario Big Five. Palabras clave Cognicin Lgica Personalidad ABSTRACT ADVANCES IN THE STUDY OF THE RELATIONSHIP BETWEEN LOGIC COGNITION AND PERSONALITY We propose a review of recent advances concerning the understanding of the relationship between personality and logic cognition. This work analyzes such topic for the particular case of DeMorgans laws. Earlier fndings linking cognition of these laws to personality factors such as introversion, neuroticism, self-esteem, intro- spection and need for cognition are reviewed. We rec- ommend further studies to replicate and expand the evaluation of other fundamental personality factors such as those included in the Big Five personality inventory. Key words Cognition Logic Personality 86 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA nera signifcativa con el reconocimiento de las leyes de DeMorgan. De manera especfca, se encontr que: i) la autoestima correlaciona de manera signifcativa y direc- ta con la intuicin lgica, ii) la necesidad de cognicin correlaciona de manera inversa con la intuicin lgica y, iii) la calidad de la introspeccin explica ms de un 40% del reconocimiento de las leyes de DeMorgan (Macbeth et al., 2011). El tamao del efecto asociado a estos fen- menos de correlacin y regresin result entre mediano y grande (d de Cohen prximas a 0,50 y f cuadrado ma- yores que 0,35). La revisin de estos antecedentes so- bre estudios iniciales de cognicin lgica sobre leyes de DeMorgan permite concluir que: 1) resulta conveniente ampliar la revisin a otros factores fundamentales de la personalidad, tales como los incluidos en el inventario Big Five (Costa & McRae, 1999), 2) replicar los hallaz- gos previos en vista de futuros estudios meta-analti- cos, 3) proponer una jerarquizacin de factores de per- sonalidad que resulten predictivos del rendimiento en cognicin de leyes de DeMorgan, 4) generar posibles aplicaciones de los hallazgos, sobre todo para el mbi- to educativo. BIBLIOGRAFA Braine, M. D. S. (1978). On the relation between the natural logic of reasoning and standard logic. Psychological Review, 85, 1-21. Carriedo, N., Moreno, C., Gutirrez, F., & Garca Madruga, J. A. (1998). Modelos mentales en conjunciones, disyunciones y con- dicionales: Replicacin de un estudio de Rips. En M. D. Valia & M. J. 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Are conjunctive inferences easier than disjunctive inferences? A comparison of rules and models. The Quarterly Journal of Experimental Psychology, 54, 613-631. Johnson-Laird, P. N. (1983). Mental models. Towards a cognitive science of language, inference and consciousness. Cambridge: Cambridge University Press. Johnson-Laird, P. N., Byrne, R. M. J., & Schaeken, W. (1994). Why models rather than rules give a better account of propositional reasoning: A reply Bonatti and to OBrien, Braine & Yang. Psycho- logical Review, 101, 734-739. Macbeth, G., Lpez Alonso, A. O., Razumiejczyk, E., Sosa, R. A., Pereyra, C. I. & Fernndez, J. H. (2009). Calibration biases in lo- gical reasoning tasks. SUMMA Psicolgica UST, 6, 19-30. Macbeth, G., Razumiejczyk, E. & Adrover, J.F. (en prensa). Efec- to de la personalidad sobre la intuicin lgica: El caso de las leyes de DeMorgan. Acta Psiquitrica y Psicolgica de Amrica Latina. Macbeth, G. & Razumiejczyk, E. & Campitelli, G. (2011). 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years). Battery Luria-DNA (Subtest 1 to 6) Test of Later- ality; Vandenberg Mental Rotation Test and Kuse (MRT) ; Reading Test Mental Mirada and ratio (2D: 4D). Two groups were formed with values of G2 G1y 2D: 4D larg- er and smaller than the median respectively. Results ob- tained signifcant differences between G1 and G2 MRT (mean SD 4.10 3.10, 2.88 2.63 respectively, P = 0.0498). Other variables were not signifcantly different. Most had preferred right hand (manual-breech). Good yields were obtained in perceptual speed, verbal ability, visual memory and empathy. Not so in spatial orienta- tion. Conclusion: No signifcant differences between groups in FCS, although correlations between some variables that explain the functional dimorphism in the neuropsychological profles. Key words Functions Brain Dimorphism Androgenization Existe amplia bibliografa acerca del dimorfsmo sexual cerebral. Los niveles de andrgenos perinatales regu- lan caractersticas sexualmente dimrfcas (anatomof- siologa cerebral y FCS) (Hampson, Ellis y Tenk, 2008). Objetivo: Explorar en mujeres las FCS, sexualmente dimrfca re- lacionndolas con una medida antropomtrica regulada por los andrgenos perinatales: relacin de longitud en- tre el segundo y cuarto dedo (2D:4D). Metodologa: Mujeres (n=84, 18-42 aos). Batera Luria-DNA (Sub- test 1- 6) (1); Test de Lateralidad; Test de Rotacin Men- tal Vanderberg and Kuse (MRT) ; Test de Lectura Men- tal de la Mirada y Relacin (2D:4D). Se conformaron dos grupos G1y G2 con valores de 2D:4D mayores y menores que la mediana respectivamente. Resultados: Obtuvimos diferencias signifcativas de MRT entre G1 y G2 (media DE = 4.10 3.10; 2.88 2.63 respectiva- mente; P = 0.0498). Otras variables no presentaron di- ferencias signifcativas. La mayora present preferen- RESUMEN Existe amplia bibliografa acerca del dimorfsmo sexual cerebral. Los niveles de andrgenos perinatales regu- lan caractersticas sexualmente dimrfcas (anatomof- siologa cerebral y FCS) (Hampson, Ellis y Tenk, 2008). Objetivo: Explorar en mujeres las FCS, sexualmente di- mrfca relacionndolas con una medida antropomtri- ca regulada por los andrgenos perinatales: relacin de longitud entre el segundo y cuarto dedo (2D:4D). Meto- dologa: mujeres (n=84, 18-42 aos). Batera Luria-DNA (Subtest 1- 6) (1); Test de Lateralidad; Test de Rotacin Mental Vanderberg and Kuse (MRT) ; Test de Lectura Mental de la Mirada y Relacin (2D:4D). Se conforma- ron dos grupos G1y G2 con valores de 2D:4D mayores y menores que la mediana respectivamente. Resulta- dos: obtuvimos diferencias signifcativas de MRT entre G1 y G2 (media DE = 4.10 3.10; 2.88 2.63 respecti- vamente; P = 0.0498). Otras variables no presentaron diferencias signifcativas. La mayora present prefe- rencia diestra (manual-podlica). Se obtuvieron buenos rendimientos en Velocidad Perceptiva, Habilidades Ver- bales, Memoria Visual y Empata. No as en orientacin espacial. Conclusin: No hubo diferencias signifcativas en FCS entre grupos, aunque se observaron correlacio- nes entre algunas variables que explicaran el dimorfs- mo funcional en los perfles neuropsicolgicos. Pala- bras clave: funciones, cerebrales, dimorfsmo, androge- nizacion. Palabras clave Funciones Cerebrales Dimorfsmo Androgenizacion ABSTRACT HIGHER BRAIN FUNCTIONS (FCS) AND PERINATAL VARIABLES ANDROGENIZATION (RELATION BETWEEN SECOND AND FOURTH FINGER 2D: 4D) IN WOMAN There is extensive literature on sexual dimorphism of the brain. Perinatal levels of androgens regulate sexual- ly dimorphic characteristics (anatomophysiology brain FCS) (Hampson, Ellis and Tenk, 2008). Objective: To explore the FCS in women, sexually dimorphic relating them to an anthropometric measure perinatal regulated by androgens: length ratio between the second and fourth fnger (2D: 4D). Methods: Women (n = 84, 18-42 88 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA cia diestra (manual-podlica). Se obtuvieron buenos rendimientos en Velocidad Perceptiva, Habilidades Ver- bales, Memoria Visual y Empata. No as en orientacin espacial. Conclusin: No hubo diferencias signifcativas en FCS entre grupos, aunque se observaron correlaciones entre algunas va- riables que explicaran el dimorfsmo funcional en los perfles neuropsicolgicos. BIBLIOGRAFA Baron-Cohen, S., Richler, J., Bisarya, D., Gurunathan, N. & Whe- elwright, S. (2003). The systemizing quotient: an investigation of adults with Asperger syndrome or high-functioning autism, and normal sex differences. The Royal Society (Published online). Hampson, E., Ellis, C. L. y Tenk, C. M. (2008). On the relation between 2D:4D and sex-dimorphic personality traits. Archives of Sexual Behavior,Vol. 37, pp. 133-144. Manga, D. & Ramos, F. (2000). Batera Luria-DNA. Diagnstico Neuropsicolgico de Adultos. Madrid: TEA Ediciones, S.A. Peters, M., Laeng, B., Latham, K., Jackson, M., Zaiyouna, R. & Richardson, C. (1995). A Redrawn Vandenberg and Kuse Mental Rotations Test: Different Versions and Factors That Affect Perfor- mance. Brain and Cognition, 28(1), 39-58. 89 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA INFLUENCIA DE LOS FACTORES SOCIOCULTURALES Y ACTITUD ANTE LA SINTOMATOLOGA PREMENSTRUAL (AFM) Perarnau, Paula; Fasulo, Vernica Facultad de Ciencias Humanas, Universidad Nacional de San Luis. Argentina differed in the two populations in the SPM category, San Luis (mean = 0.35 SD 0.08) Lujn SPM (mean = 0.19 SD 0.14). (p = 0.009), although between PMDD Lujn (mean = 0.75 SD 0.42) and San Luis PMDD (mean = 0.69 SD 0.39) differences were not signifcant (p = 0.640). PMDD, regardless of the population had more severe symptoms (mean = 0.71 0, 39) (p = 0) with re- spect to SPM (mean = 0.27 SD 0.19). Sociocultural factors and levels of urbanization not infuence premen- strual symptoms, assigning a weight important biologi- cal factor in gravity. Key words Attitude Premenstrual Gravity En relacin a los sntomas premenstruales existen con- troversias respecto a su universalidad (Bocchino, 2004) dependera de aspectos socioculturales (educacin, nivel de urbanizacin). Tambin la actitud frente a la menstruacin (Chrisler, 1988) sera central en la grave- dad de la sintomatologa (Chatuverdi, 1991). Segn la gravedad se consideran tres categoras: Sntomas Pre- menstruales, Sndrome Premenstrual (SPM) y Trastor- no Disfrico Premenstrual (TDPM). Objetivo: comparar severidad y AFM de poblaciones suburbana (Lujan; n= 50) y urbana (Capital n=50), en mujeres 29- 48 aos. No se encontraron diferencias signifcativas en AFM entre ambas poblaciones (p0,845); ni entre mujeres profesionales y no profesio- nales p0,891. La gravedad de sntomas difri en am- bas poblaciones en la categora SPM, San Luis (me- dia=0,35 DE 0,08) SPM Lujn (media=0,19 DE 0,14). (p=0,009); aunque entre TDPM Lujn (media =0,75 DE 0,42) y TDPM San Luis (media=0,69 DE 0,39) no se obtuvieron diferencias signifcativas (p=0,640). El TDPM, independientemente de la poblacin present mayor gravedad de sntomas (media=0,71 DE 0, 39) (p=0) respecto a SPM (media=0,27 DE 0,19). Los fac- tores socioculturales y niveles de urbanizacin, no in- fuiran en los sntomas premenstruales, asignndole un peso importante al factor biolgico en la gravedad. RESUMEN En relacin a los sntomas premenstruales existen con- troversias respecto a su universalidad (Bocchino, 2004) dependera de aspectos socioculturales (educacin, nivel de urbanizacin).Tambin la actitud frente a la menstruacin (Chrisler, 1988) sera central en la grave- dad de la sintomatologa (Chatuverdi, 1991) . Segn la gravedad se consideran tres categoras: Sntomas Pre- menstruales, Sndrome Premenstrual (SPM) y Trastor- no Disfrico Premenstrual (TDPM). Objetivo: comparar severidad y AFM de poblaciones suburbana (Lujan; n= 50) y urbana (Capital n=50), en mujeres 29- 48 aos. No se encontraron diferencias signifcativas en AFM entre ambas poblaciones (p=0,845); ni entre mujeres profe- sionales y no profesionales p=0,891. La gravedad de sntomas difri en ambas poblaciones en la categora SPM, San Luis (media=0,35 DE 0,08) SPM Lujn (me- dia=0,19 DE 0,14). (p=0,009); aunque entre TDPM Lu- jn (media =0,75 DE 0,42) y TDPM San Luis (me- dia=0,69 DE 0,39) no se obtuvieron diferencias signi- fcativas (p=0,640). El TDPM, independientemente de la poblacin present mayor gravedad de sntomas (me- dia=0,71 DE 0, 39) (p=0) respecto a SPM (me- dia=0,27 DE 0,19). Los factores socioculturales y nive- les de urbanizacin, no infuiran en los sntomas pre- menstruales, asignndole un peso importante al factor biolgico en la gravedad. Palabras claves: actitud, pre- menstrual, menstruacin, gravedad. Palabras clave Actitud Premenstrual Menstruacin Gravedad. ABSTRACT INFLUENCE OF SOCIOCULTURAL FACTORS AND ATTITUDES TOPREMENSTRUAL SYMPTOMATOLOGY In relation to premenstrual symptoms is controversial with respect to its universality (Bocchino, 2004), would depend on aspects of cultural (education, level of ur- banization). Also the attitude toward menstruation (Chrisler, 1988) (ATM) would be central in the severity of symptoms. Considers three categories: PMS, Premen- strual Syndrome (PMS) and premenstrual dysphoric disorder (PMDD). Objective: To compare severity and suburban populations AFM (Lujan, n = 50) and urban (Capital n = 50), females 29 - 48 years. No signifcant differences were found in ATM between the two popula- tions (p = 0.845) or between professional and nonpro- fessional women p = 0.891. The severity of symptoms 90 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA BIBLIOGRAFA Chatuverdi, C. (1991). Sociocultural aspects of menstrual attitudes and premenstrual experiencies, in India social Science and Medi- cine, Vol. N 32,pp. 349-551. Chrisler, J. (1988). Age, gender -Role orientation and attitudes toward menstruation. Rev. Psychological Reports, Vol. 63, pp. 827-834. Bocchino, S.(2004).Salud Mental de la mujer: Sntomas y trastor- nos premenstruales. Clnica y tratamiento. Rev. Psiquiatra del Uruguay. Vol. 68, p. 78-89. Halbreich U; Borenstein J; Pearlstein T; Kahn L (2003). The pre- valence impairment, impact, and burden of premenstrual dyspho- ric disorder (PMS/PMDD). Rev. Psychoneuroendocrinology; Vol. N 28, Suppl 3, pp 1-23. 91 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA INTERFERENCIA ENTRE REPRESENTACIONES GUSTATIVAS Y AUDITIVAS EN LA MEMORIA OPERATIVA Razumiejczyk, Eugenia; Juregui, Matilde; Grigera, Diana; Britos, Paola; Genovese, Ignacio; Macbeth, Guillermo Consejo Nacional de Investigaciones Cientfcas y Tcnicas. Argentina INTRODUCCIN Se ha defnido a la memoria operativa como un sistema que mantiene y manipula temporalmente informacin (Baddeley, 1995, Lepsien & Nobre, 2007). Al respecto, diversos estudios han mostrado que el sujeto no siem- pre es capaz de procesar dos fuentes de informacin de manera simultnea (Roberts & Hall, 2008; Stroop, 1935; Weissman, Wagner & Woldorff, 2004; White & Prescott, 2007). Stroop (1935) efectu un estudio en el que pre- sentaba a los participantes palabras cuyos signifcados remitan a colores, escritas en colores iguales o diferen- tes a los que se referan dichas palabras. La consigna requera nombrar el color en el que estaba escrita la pa- labra en el menor tiempo posible. Los resultados mos- traron que se registraron mayores aciertos y menores tiempos de reaccin cuando ambos estmulos eran con- gruentes, es decir, cuando el color era el mismo que el signifcado de la palabra escrita (MacLeod, 1991). Sin embargo, cuando el signifcado de la palabra y el color eran diferentes, los participantes requeran signifcati- vamente un mayor tiempo de procesamiento. Se ha estudiado la interferencia stroop intermodal entre la visin y la audicin (Roberts & Hall, 2008; Roelofs, 2005; Weissman et al., 2004), entre el olfato y el gusto (Prescott, Johnstone & Francis, 2004; White & Prescott, 2007) y entre el gusto y la palabra presentada en forma visual (Razumiejczyk, Britos & Grigera Monteagudo, 2010; Razumiejczyk, Macbeth & Adrover, 2011). El pro- psito de este trabajo es evaluar la interferencia del pro- cesamiento entre las representaciones gustativas y au- ditivas en la memoria operativa. MTODO Participantes: Participaron del experimento 40 sujetos argentinos universitarios cuya edad promedio result de 22,68 aos (de = 6,27 aos). La muestra estuvo con- formada por 25 mujeres (62,5%) y por 15 varones (37,5%). Materiales: Se administraron como estmulos gustati- vos, durazno, ciruela, frutilla y naranja. La totalidad de los materiales y utensilios empleados en este experi- mento (cucharitas, vasos y servilletas) se desecharon luego de la utilizacin por cada participante. Procedimiento: El estudio fue realizado por un experi- mentador voluntario quien fue entrenado en el procedi- miento y no conoca su propsito, de modo que su fun- cin fue la de experimentador ciego. Se utiliz el para- digma de la tarea stroop intermodal. Un estmulo gusta- tivo era administrado a cada participante junto con una palabra presentada en forma auditiva. La consigna con- RESUMEN El propsito de este trabajo es evaluar la interferencia del procesamiento entre las representaciones gustati- vas y auditivas en la memoria operativa. Participaron del estudio 40 sujetos argentinos universitarios cuya edad promedio result de 22,68 aos (de = 6,27 aos). Se efectu un experimento en el que un estmulo gusta- tivo era administrado a cada participante junto con una palabra presentada en forma auditiva. La consigna re- quera identifcar el estmulo gustativo en el menor tiem- po posible. Segn la relacin entre el estmulo gustativo y el estmulo auditivo se determinaron tres condiciones (estmulos congruentes, estmulos incongruentes y est- mulos controles). Los resultados sugieren que la interfe- rencia stroop intermodal result menor en el nivel de es- tmulos congruentes, as, los resultados muestran que se produjeron mayores aciertos y el tiempo de reaccin de las respuestas fue ms rpido en comparacin con los estmulos incongruentes y controles. En futuras in- vestigaciones se recomienda estudiar la interferencia stroop intermodal olfativa y auditiva. Palabras clave Interferencia Stroop Gusto Visin ABSTRACT INTERFERENCE BETWEEN GUSTATIVE AND AUDITORY REPRESENTATIONS IN WORKING MEMORY The purpose of this study was to evaluate the process- ing interference between gustatory and auditory repre- sentations in working memory. The study included 40 subjects whose age average was 22.68 years (SD = 6.27 years). An experiment was conducted in which gustatory stimuli were administered to each participant along with words presented through an auditory modal- ity. The experimental task was to identify the gustatory stimulus in the shortest possible time. According to the relationship between the gustatory stimulus and the au- ditory stimulus, the tasks were organized in three condi- tions (congruent, incongruent and control) in coherence with previous studies. The results suggest that intermo- dal stroop interference was lower for the congruent stimuli. In that condition, reaction times were faster and recognitions were higher when compared to incongru- ent and control stimuli. It is recommended that future re- search study the cross-modal interference for olfactory and auditory stroop effect. Key words Stroop Interference Taste Audition 92 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA sista en identifcar el estmulo gustativo en el menor tiempo posible. Segn la relacin entre el estmulo gus- tativo y el estmulo auditivo se determinaron tres condi- ciones: 1) estmulos congruentes: el estmulo auditivo coincide con el nombre del estmulo gustativo; 2) est- mulos incongruentes: el estmulo auditivo no coincide con el nombre del estmulo gustativo pero representa una fruta; 3) estmulos controles: el estmulo auditivo y el estmulo gustativo no coinciden pero el estmulo audi- tivo no representa un comestible. Se efectuaron 12 en- sayos para cada participante. Se consign que antes de cada ensayo el participante efecte una limpieza bucal con agua. Los pares de estmulos (gustativo y auditivo) fueron administrados a cada participante en un orden aleatorio. Se solicit a cada participante que diera su consentimiento por escrito para la realizacin de este experimento. RESULTADOS: Para comparar el tiempo de reaccin en las condiciones de estmulos congruentes, incongruentes y controles se realizaron comparaciones de a pares utilizando la prue- ba t para muestras apareadas. Los resultados mostra- ron que el tiempo de reaccin de los estmulos con- gruentes (media=6,36; de=1,94) result menor (t = -2,85; p = 0,007; d Cohen = 0,462) que el tiempo de re- accin de los estmulos incongruentes (media=7,42; de=2,60); y que el tiempo de reaccin de los estmulos congruentes result menor (t = -2,5; p = 0,015; d Cohen = 0,313) que el tiempo de reaccin de los estmulos con- troles (media=7,06; de=2,5). No se hallaron diferencias entre el tiempo de reaccin de los estmulos incon- gruentes y controles (t = 0,908; p = 0,369; d Cohen = 0,14). Con el fn de comparar el nmero de aciertos en las condiciones de estmulos congruentes, incongruentes y controles se realizaron comparaciones de a pares utili- zando la prueba t para muestras apareadas. Los resul- tados mostraron que el nmero de aciertos de los est- mulos congruentes (media=2,6; de=1,172) result ma- yor (t = 3,728; p= 0,001; d Cohen = 0,719) que el nme- ro de aciertos de los estmulos incongruentes (me- dia=1,75; de=1,193); y que el nmero de aciertos de los estmulos congruentes result mayor (t = 5,364; p < 0,001; d Cohen = 1,038) que el nmero de aciertos de los estmulos controles (media=1,5; de=0,934). No se hallaron diferencias entre el nmero de aciertos de los estmulos incongruentes y controles (t = 1,35; p = 0,185; d Cohen = 0,23). Las variables comparadas resultaron normales y homo- cedsticas por las pruebas de Kolmogorov-Smirnov y Levene, respectivamente. Discusin Los resultados sugieren que la interferencia stroop in- termodal result menor en el nivel de estmulos con- gruentes, esto es, cuando el estmulo gustativo y la pa- labra presentada en forma auditiva coincidieron. As, los resultados muestran que se produjeron mayores acier- tos y el tiempo de reaccin de las respuestas fue ms rpido. En oposicin, la interferencia stroop result ma- yor en los niveles de estmulos incongruentes y contro- les dado que se produjeron mayores errores y mayor tiempo de reaccin. Estos datos son consistentes con los de White & Prescott (2007) quienes estudiaron la in- terferencia stroop entre las representaciones gustativas y olfativas y con los de Razumiejczyk, et al. (2010, 2011) quienes estudiaron este fenmeno entre las representa- ciones gustativas y visuales lingsticas. En futuras investigaciones se recomienda estudiar la in- terferencia stroop intermodal olfativa y auditiva. Resulta relevante investigar si la competencia entre los estmu- los olfativos y los estmulos auditivos produce resulta- dos similares a los aqu presentados. BIBLIOGRAFA Baddeley, A. (1995). Working memory: the interface between memory and cognition. En Schacter, D.L. & Tulving, E. (Edit.) 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Key words Stress Vulnerability Neuropsychology Los pacientes que consultan a los Servicios Endocrino- loga, generalmente referen sntomas diversos. Entre ellos se encuentran trastornos cognitivos como dismi- nucin en la memoria, difcultades para concentrarse y prestar atencin. Estas alteraciones han sido encontra- das en varias enfermedades endocrinolgicas, demos- trndose que el estrs puede afectar tambin la esfera cognitiva. Muchos de estos pacientes llegan a la consulta luego de haber pasado por varias consultas mdicas. Sin embar- go, cuando se realizan los estudios no todos los pacien- tes consultantes quedan en tratamiento, dado que sus estudios muestran un funcionamiento endocrinolgico normal quedando excluidos de la asistencia mdica, aun- que referen sntomas que afectan su calidad de vida pe- ro que no tienen causa endocrinolgica especfca. El objetivo de este trabajo es demostrar que los snto- mas neuropsicolgicos encontrados en pacientes con- sultantes endocrinolgicamente sanos, estn asocia- dos a un estado de vulnerabilidad al estrs, caracteriza- do por la presencia de ansiedad, depresin, neuroticis- mo, alexitimia y sucesos traumticos tempranos. Para ello se estudiaron: la memoria verbal y visual a corto y largo plazo, la atencin sostenida y la fexibizalacin mental. Se desprende que, dichos pacientes no deberan que- dar excluidos del sistema de salud implicando el replan- teo de las tcnicas de intervencin proponindose es- trategias ms integrativas que incluyan el abordaje psi- colgico para dichos pacientes. RESUMEN Los pacientes que consultan a los Servicios Endocrino- loga, generalmente referen sntomas diversos. Entre ellos se encuentran trastornos cognitivos como dismi- nucin en la memoria, difcultades para concentrarse y prestar atencin. Estas alteraciones han sido encontra- das en varias enfermedades endocrinolgicas, demos- trndose que el estrs puede afectar tambin la esfera cognitiva. Muchos de estos pacientes llegan a la con- sulta luego de haber pasado por varias consultas mdi- cas. Sin embargo, cuando se realizan los estudios no todos los pacientes consultantes quedan en tratamien- to, dado que sus estudios muestran un funcionamiento endocrinolgico normal quedando excluidos de la asis- tencia mdica, aunque referen sntomas que afectan su calidad de vida pero que no tienen causa endocrinolgi- ca especfca. El objetivo de este trabajo es demostrar que los sntomas neuropsicolgicos encontrados en pa- cientes consultantes endocrinolgicamente sanos, es- tn asociados a un estado de vulnerabilidad al estrs, caracterizado por la presencia de ansiedad, depresin, neuroticismo, alexitimia y sucesos traumticos tempra- nos. Para ello se estudiaron: la memoria verbal y visual a corto y largo plazo, la atencin sostenida y la fexibiza- lacin mental. Se desprende que, dichos pacientes no deberan quedar excluidos del sistema de salud impli- cando el replanteo de las tcnicas de intervencin pro- ponindose estrategias ms integrativas que incluyan el abordaje psicolgico para dichos pacientes. Palabras clave Estrs Vulnerabilidad Neuropsicologa ABSTRACT ALTERACIONES NEUROPSICOLGICAS EN PACIENTES VULNERABLES AL ESTRS Patients who consult to the Endocrinology Services, generally refer diverse symptoms. Between them, they refer cognitive disorders such as a decrease in memory, diffculties to concentrate and to pay attention. These al- terations have been found in several endocrinological diseases. It has also been demonstrated that stress can affect the cognitive sphere. Many of these patients as- sist to the consultation after having had others medical consultations. Nevertheless, when the studies are per- formed not all the patients stay in treatment, provided that the studies show an endocrinological normal func- tioning. It is for this reason that many patients remain ex- cluded from the medical assistance, though they refer 94 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA BIBLIOGRAFA Beck, A. T.; Ward, C. H.; Mendelson M. (1961).Beck Depression Inventory (BDI). Arch Gen Psychiatry 4: 561-571 Burin, D. I.; Drake, M. A.; Harris, P (2007): Evaluacin Neuropsi- colgica en Adultos. Ed. Paids Cano-Vindel, A.; Miguel - Tobal, J. J. (1992). Inventario de Valo- racin y Afrontamiento (IVA), Univ. Complutense de Madrid. (Adapt. Arg. Leibovich de Figueroa, N.). Uba - Conicet, 2000. Casullo M. M. (1991). Autoanlisis de Sucesos de Vida. En Casu- llo M. M., de Figueroa, N. B. Leboivich y Aszkenazi, M. Psicoteca Editorial, Buenos Aires. Costa, P. T., McCrae, R. R. (1985). The NEO Personality Inventory Manual. Odessa, FL: PAR Inc. Denney, D. R.; Frisch, M. B. (1981). 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As 95 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA RECONOCIMIENTO FACIAL DE EMOCIONES COMPLEJAS EN UNA MUESTRA DE ADULTOS MAYORES NORMALES Snchez, Natalia Alejandra; Rubinstein, Wanda Facultad de Psicologa, Universidad de Buenos Aires - HIGA Eva Pern BIBLIOGRAFA 1)Simon Baron-Cohen, Sally Wheelwright, Jacqueline Hill, Yogini Raste and Ian Plumb. The Reading the Mind in the Eyes Test Revised Version: A study with normal adults, and adults with Asperger Syndrome or High-Functioning Autism. 2001 2)Ofer Golan, Simon Baron Cohen, Jacqueline Hill. The Cambrig- de mindreading Face - Voice Battery. Test Complex Emotion Recognition 3)Baron-Cohen S. How to build a baby that reads minds: Cogniti- ve mechanisms in mindreading. Cahiers de Psychologie Cogniti- ve 1994; 13: 513-552. 4) Baron-Cohen S, Belmonte MK. Autism: A Window Onto the Development of the Social and the Analytic Brain. 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La muestra original fue de 17 sujetos con una media de edad de 27(Golan et al., 2006). Se le administr la prueba la Ba- tera de Lectura de la Mente en el Rostro de Cambridge. El 100% de los controles normales rindieron -1,5 desvos por debajo de la media de la muestra original. Por otro la- do la edad correlaciona con el desempeo en la prueba. Dichos resultados sugieren la importancia de considerar la edad y las diferencias culturales, planteando la necesi- dad de normas locales al momento de valorar el rendi- miento en esta prueba en nuestra poblacin. Palabras clave Reconocimiento Emociones Controles CAM ABSTRACT FACIAL RECOGNITION OF COMPLEX EMOTIONS IN A SAMPLE OF ELDERLY NORMAL SUBJECTS Facial emotions recognition skill require the Theory of Mind (ToM). The Cambridge mindreading Face - Bat- tery Voice. Complex Emotion Recognition Test (CAM). (Golan et al., 2006) is a battery developed to assess ToM, using moving images, this task being more envi- ronmentally ecological than assess static images such as Reading the Mind in the Eyes by Baron - Cohen, et al. (2001). The aim is to compare the performance in the CAM of the original population with a local sample of normal older adults. We evaluated 26 normal subjects, mean age 74. The original sample was 17 subjects with a mean age of 27 (Golan et al., 2006). The test adminis- tered was Battery mindreading Face of Cambridge. Re- sults: 100% of normal controls yielded -1.5 deviations below the mean of the original sample. On the other hand, the age correlated with performance on the test. Conclusion: These results suggest the importance of considering the age and cultural differences, raising the need for local standards in appraising the performance in this test in our population. Key words Recognition Emotion Controls CAM 96 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA EL ROL DE LOS MARCADORES DEL DISCURSO EN LA COMPRENSIN DE DISCURSO ORAL ESPONTNEO Yomha Cevasco, Jazmin CONICET - Universidad de Buenos Aires Recognition times were slower when the words preced- ed a flled pause than when the flled pause had been edited. These fndings suggest that hearing these paus- es produces a discontinuity with the information con- tained in the statement that precedes the flled pause. Key words Discourse markers Comprehension El rol de los marcadores del discurso en la comprensin de discurso oral espontneo Este estudio investig la relacin entre la escucha de marcadores metadiscursivos conversacionales (eh, em, y este), como seales de demora en la prosecu- cin del habla, y el procesamiento de conceptos men- cionados durante una conversacin. Los marcadores conversacionales eh, este y em ocurren dado que el discurso oral es producido en res- puesta a demandas situacionales inmediatas (Stubbs, 1983). Es decir, los hablantes son forzados a comenzar a hablar an cuando no estn completamente seguros de lo que quieren decir (Heeman & Allen, 1999). Esto hace que duden, hagan pausas, repitan palabras, y abandonen frases para reemplazarlas por otras (Fox Tree & Schrock, 1999; Brennan & Schober, 2001; Fox Tree, 1995). A decir de Clark (1996), los hablantes pro- ceden a travs de dos vas simultneas de comunica- cin. En la va primaria, producen enunciados referidos al tema de conversacin. En la va colateral, proveen seales acerca de la produccin del discurso en s (po- sibles demoras, errores, reformulaciones, etc). Es decir, los hablantes necesitan sealar cuando estn teniendo problemas para formular sus ideas, o estn decidiendo cmo proseguir. La utilizacin de eh, este, y em les permite indicar esto (Brennan & Williams, 1995; Bor- tfeld, Leon, Bloom, Schober, & Brennan, 2001; Clark, 1994; Clark & Fox Tree, 2002; Clark & Wasow, 1998). Eh, este y em indican que el hablante est demoran- do para buscar informacin activamente, o recuperar in- formacin que se cree tener (Brennan & Williams, 1995). En otras palabras, los marcadores metadiscursi- vos conversacionales representan recursos tiles para la coordinacin de estados mentales de los participan- tes durante una conversacin. Dado que los marcadores conversacionales de discur- so indican que el hablante tiene cierta difcultad para formular su prximo enunciado (seal en la va colate- ral), se esper que produjeran una discontinuidad o rup- RESUMEN Este estudio examin la relacin entre la escucha de marcadores metadiscursivos conversacionales (tales como eh y este) y el procesamiento de conceptos mencionados durante una conversacin. Los marcado- res metadiscursivos conversacionales permiten al ha- blante sealar que va a haber una demora en la prose- cucin del habla, debida a difcultades para formular el prximo enunciado. Se esper que la escucha de estos marcadores resultara en un quiebre en la coherencia discursiva, tal que las palabras pertenecientes al enun- ciado que lo precede se encontraran menos accesibles en presencia que en ausencia del mismo. Con el fn de investigar esto, se crearon dos versiones de un material oral (secciones de entrevistas a escritores): una original o de marcadores presentes, y una editada o de marca- dores ausentes. Se pidi luego a 32 participantes que escucharan las entrevistas, y que realizaran una tarea de reconocimiento de palabras. Los resultados indica- ron que la escucha de marcadores metadiscursivos conversacionales resulta en mayores tiempos de reco- nocimiento para las palabras del enunciado que los pre- cede, en comparacin con una versin en la que el mar- cador ha sido recortado. Este resultado sugiere que la escucha de estos marcadores produce una discontinui- dad o ruptura con la informacin del enunciado que pre- cede al marcador. Palabras clave Marcadores del Discurso Comprensin ABSTRACT THE ROLE OF DISCOURSE MARKERS IN THE COMPREHENSION OF SPONTANEOUS SPOKEN DISCOURSE This study examined the relation between the hearing of flled pauses (such as um, uh) and the processing of words mentioned during a conversation. Filled pauses allow the speaker to indicate that there will be a delay, given that he or she is having speech production diffcul- ties. It was expected that the hearing of these pauses would result in a coherence break, such that the words that are part of the statement that precedes the flled pause should be less available than the same words if the flled pause has been edited. In order to examine this, two versions of the material (excerpts of interviews with fction writers) were created: an original or with flled pauses version and an edited or without flled pauses version. Thirty-two participants were asked to listen to the interviews, and to perform a word recognition task. 97 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA tura con la informacin acerca del tema de conversa- cin (va primaria). Es decir, se esper que produjeran un quiebre en la coherencia discursiva, a partir de que el oyente debe procesar que el hablante demorar en la prosecucin del habla hasta que resuelva sus difculta- des, o reformule sus ideas. En consecuencia, las pala- bras contenidas en el ltimo enunciado estarn menos accesibles, y tendrn tiempos de reconocimiento ms largos que en ausencia del marcador. MTODO Participantes La muestra fue compuesta por 32 alumnos de la Univer- sidad de Buenos Aires, con un promedio de edad de 21 aos. Materiales Los materiales consistieron en secciones de entrevistas a escritores. A partir de stas, se seleccionaron 18 ca- sos en los que un marcador metadiscursivo conversa- cional ocurra al fnal de un enunciado. A continuacin, se seleccion una palabra del enunciado que contena el marcador conversacional para ser presentada al fnal del mismo. Con el fn de establecer el rol del marcador, se cre una segunda versin en la que cada uno de ellos fue recortado a travs de un programa de edicin. Procedimiento Los participantes fueron testeados en una nica sesin individual. Se les presentaron los audios de las entrevis- tas en la computadora, y se les pidi que decidieran, en los puntos en que se interrumpieran los audios, si la pa- labra que apareca en pantalla haba sido parte del lti- mo enunciado escuchado o no. RESULTADOS Y DISCUSIN Los tiempos de reaccin fueron medidos en milisegun- dos, comparando las condiciones de marcador presen- te y marcador recortado. Para cada una de las tareas, se llev a cabo un anlisis de varianza de una va. Los resultados indican que la escucha de un marcador metadiscursivo conversacional resulta en mayores tiempos de reconocimiento para las palabras del enun- ciado que lo contiene en comparacin con una versin en la que el marcador ha sido recortado. En conclusin, parece que la escucha de un marcador metadiscursivo conversacional produce una discontinuidad o ruptura con la informacin del enunciado que lo contiene. BIBLIOGRAFA Bortfeld, H., Leon, S.D., Bloom, J.E., Schober, M.F., & Brennan, S.E. (2001). 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Argentina RESUMEN Este trabajo es parte de un proyecto sustentado en el marco terico del constructivismo, y cuyo objetivo es el desarrollo de estrategias innovadoras para la ensean- za y el aprendizaje de contenidos biolgicos en la carre- ra de Psicologa de la UNR. El principal problema que origin esta investigacin fue la falta de motivacin de los alumnos hacia el estudio de materias con este tipo de contenidos, basada en una supuesta falta de rela- cin de las mismas con la futura prctica profesional. Con el propsito de contribuir a la superacin de este obstculo se realizaron indagaciones bibliogrfcas acerca de temas donde se establecen interrelaciones entre la biologa y la psicologa. A partir de estos desa- rrollos tericos se disearon situaciones problemticas que se trabajaron, a modo de prueba, con algunos gru- pos de estudiantes. Los temas elegidos fueron: plastici- dad neuronal (potenciacin y depresin a largo plazo, neurognesis) e infuencia de la informacin gentica en las manifestaciones del orden psicolgico (tratando los mecanismos de expresin gnica). Las principales observaciones indican la persistencia del dualismo mente-cuerpo y las difcultades para el reconocimiento de la interrelacin. El intercambio result til para poner en cuestin la necesidad de una formacin amplia para la prctica profesional de la psicologa. Palabras clave Psicologa Biologa Didctica Constructivismo ABSTRACT CONTRIBUTIONS OF MOLECULAR AND CELLULAR BIOLOGY TO THE TRAINING OF THE PSYCHOLOGIST This paper is part of a research project based on the theoretical framework of constructivism, and whose ob- jetive is the development of innovative strategies for teaching and learning of biological subjects in the psy- chology degree at the Universidad Nacional de Rosario. The main problem that originated this research was the lack of motivation among students towards the study of these subjects. This conception is based on the alleged lack of relationship between biological training and pro- fessional practice. In order to contribute to overcoming this diffculty was conducted a literature review on is- sues that establish relations between biology and psy- chology. Based on the results of the literature search was designed problematic situations to be worked with groups of students on a trial basis. The topics selected were: neuronal plasticity (long-term potentiation and de- pression, neurogenesis) and infuence of genetic infor- mation in manifestations of a psychological nature (ana- lyzing the mechanisms of gene expression). The main observations showed the persistence of mind-body du- alism and the diffculties in the recognition of the rela- tionship. Exchange of views was useful to discuss the need for extensive training for the professional practice of psychology. Key words Psychology Biology Didactics Constructivism BIBLIOGRAFA Ansermet, F., Magistretti, P. (2006) A cada cual su cerebro. Plas- ticidad neuronal e inconsciente. Buenos Aires, Katz. Audisio, E. (2009). Interrelaciones de la biologa con la psicologa: Aportes para su problematizacin. Revista Mnmica, 1(1): 167-182. Carr, J.E. (2008). Advancing psychology as a bio-behavioral science. J Clin Psychol Med Settings, 15(1): 40-44. Crews, D. (2008). Epigenetics and its implications for behavioral neuroendocrinology. Front Neuroendocrinol, 29(3): 344-357. Hernndez, P., Abel, T. (2008). The role of protein synthesis in memory consolidation: progress amid decades of debate. Neuro- biol Learn Mem, 89(3): 293-311. Kandel, E. (2007). Psiquiatra, psicoanlisis y la nueva biologa de la mente. Barcelona: Ars Medica. Leuner, B., Gould, E. (2010). 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Integr Psychol Behav Sci, 43(2): 104-115. 102 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA ANLISE DA RELAO ENTRE A QUALIDADE DE SONO E A MEMRIA OPERACIONAL EM ESTUDANTES DO ENSINO FUNDAMENTAL De Freitas Arajo, Danilo; Costa, Mnica; Moraes De Almondes, Katie; Pereira, Antonio Universidade Federal do Rio Grande do Norte. Brasil RESUMEN Qualidade do sono ruim pode resultar em prejuzos nas funes executivas, sobretudo na memria operacional e na ateno. O objetivo foi avaliar a relao entre a qualidade do sono e a memria operacional de estu- dantes. A amostra foi composta por 42 alunos, mdia de idade de 10,43 (DP=1,23) anos, 22 meninos e 20 meninas. Utilizou-se o dirio do sono e o Questionrio sobre Comportamento do Sono (QSC). Foram aplica- dos os seguintes subtestes da Escala de Inteligncia Wechsler para Crianas: Completar Figuras (avalia me- mria visual), e Dgitos, contendo a Ordem Direta (me- de memria auditiva seqencial) e a Ordem Inversa (mede memria operacional). Aps a pesquisa ter sido aprovada em Comit de tica (parecer 100/2010) e ter sido assinado o Termo de Consentimento Livre e Escla- recido, foi agendada uma reunio com os responsveis na escola, para preenchimento dos protocolos. A mdia obtida com o QSC foi de 57,48 (DP=14,26) pontos, indi- cando qualidade ruim do sono. Foi verifcada correlao signifcativa positiva entre os escores do QSC e os pon- tos do Dgitos, Ordem Direta (r=0,32, p=0,04), sugerin- do que qualidade do sono ruim est associada ao de- sempenho ruim. Autores tm destacado a relao entre privao do sono e prejuzo na consolidao das me- mrias declarativas. Palabras clave Sono Qualidade Crianas WISC ABSTRACT ANALYSIS OF THE RELATION BETWEEN THE SLEEP QUALITY AND THE WORKING MEMORY IN ELEMENTARY SCHOOL CHILDREN A poor sleep quality can result in executive controls im- pairments, overall in the working memory and attention. The objective was to evaluate the relation betwen the sleep quality and the working memory of the students. The sample was composed by 40 students (mean=10.43, SD=1.23), of which 22 were boys and 22 were girls. It was used the sleep diary and the Sleep Behavior Ques- tionaire (SBQ). It was aplied the subtests Picture Com- pletion (it evaluate visual memory) and the Digit Span with series forwards (it measure short-term auditory memory) and series backwards (it measure the capaci- ty of memory work), both from Wechsler Intelligence Scale for Children. After the approval in Ethic Commit- tee and the informed consent (IC) signature, It hap- pened a reunion with the school responsibles to the suppling of the sleep protocols. The mean obted in SBQ was 57,48 (SD=14,26) points, indicanting a poor sleep quality. It was verifed a signifcant positive corelation betwen the SBQ points and Digit Span series forwards (r=0,32, p=0,04), sugesting that poor sleep quality is as- sociated with the poor performance in tasks that meas- ure memory working. The authors argue to the associa- tion betwen the sleeping privation and the impairs in the consolidation of declarative memories. Key words Sleep Quality Children WISC BIBLIOGRAFA Duckworth, A. L. & Seligman, M. E. P. (2005). Self-discipline outdoes IQ in predicting academic performance of adolescents. Psychological Science, 16, 939-44. Durmer, J. S. & Dinges, D. F. (2005). Neurocognitive consequen- ces of sleep depriva-tion. Seminars in Neurology, 25, 117-129. Walker, M. P. (2009) The role of sleep in cognition and emotion. Annals of the New York Academy of Sciences, 1156, 168-97. 103 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA PREDICTORES DE LA ESCRITURA ORTOGRFICAMENTE CONVENCIONAL Ferroni, Marina CIIPME-CONICET y CIPA-UNSAM. Argentina RESUMEN El objetivo del presente trabajo es analizar las habilida- des que predicen la escritura ortogrfcamente conven- cional en los primeros aos de escolarizacin. Se eva- lu a 51 sujetos hispanohablantes a principio (T1) y fn de primer grado (T2) mediante pruebas de conciencia fonolgica, conocimiento de correspondencias G-F, de- nominacin rpida de letras y escritura de palabras fo- nolgicamente simples. Asimismo, a fn de primer y de segundo grado (T3) se administr una prueba de lectu- ra y escritura de 71 palabras con complejidad ortogrf- ca. Una serie de regresiones por pasos sucesivos per- miti observar que el conocimiento de las correspon- dencias G-F y la escritura fonolgica del T1 y la lectura de palabras del T2 predijeron la escritura ortogrfca- mente convencional del T3. Resulta interesante anali- zar este patrn evolutivo en el marco del modelo pro- puesto por Frith (1985), en el que sucesivamente distin- tos componentes del proceso de lectura y escritura se constituyen en el factor dinmico del aprendizaje. En esta lnea, los datos obtenidos parecen sugerir que la adquisicin de la ortografa est asociado al desarrollo de la escritura fonolgica en los primeros momentos del proceso de alfabetizacin en tanto ms adelante la lec- tura se constituye en el factor dinmico en la adquisi- cin de conocimiento ortogrfco. Palabras clave Fonologa Lectura Escritura convencional ABSTRACT PREDICTORS OF CONVENTIONAL SPELLING This study aimed at identifying the predictors of conven- tional spelling acquisition. To do so, 51 Spanish-speak- ing children were given tests of phonological aware- ness, letter-knowledge, rapid naming of letters and spelling of phonologically simple words at the beginning (T1) and end (T2) of 1st grade. At the end of 2nd grade (T3) reading and spelling of orthographically complex words were assessed. A series of stepwise regressions with T3 spelling as the dependent variable showed that letter knowledge and phonological spelling were the best T1 predictors while word reading was the T2 pre- dictor. These results can be interpreted in terms of Friths (1985) model of reading and spelling acquisition. In this model phonological spelling is initially the dynam- ic element in the learning process, but once phonologi- cal spelling is mastered, reading takes over the role of advancing knowledge. Key words Phonology Decoding Conventional Spelling BIBLIOGRAFA Borzone de Manrique, A.M. & Signorini, A. (1994). Phonological awareness and reading and spelling abilities in Spanish-speaking children. British Journal of Educational Psychology 64: 429-439. Borzone de Manrique, A.M. y A. Signorini. (1998). Emergent wri- ting forms in Spanish. Reading and Writing: An Interdisciplinary Journal 10, 499-517. Borzone, A.M. & Signorini, A. (2002). El aprendizaje inicial de la lectura. 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Lenguas Modernas, 28, 7-28. 104 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA EL APRENDIZAJE DE LA OPERACIN DE SUSTRACCIN Formoso, Jesica; Jacubovich, Silvia Instituto de Investigacin de la Facultad de Psicologa, Universidad de Buenos Aires RESUMEN Durante el aprendizaje del algoritmo de la sustraccin emergen errores que clasifcamos tanto cuantitativa- mente, sobre los resultados en s de las operaciones, como cualitativamente a partir del anlisis de las pro- ducciones verbales que acompaan la ejecucin de los clculos. Realizamos un estudio piloto con diez sujetos para tomar nota de los procedimientos y de las elocu- ciones emitidas durante la tarea, analizar los errores y su naturaleza. Interpretamos los resultados a la luz de los planteos tericos actuales sobre el tema, que siguen dos lneas de investigacin: a) La lnea conceptual, que destaca la importancia de la adquisicin de los compo- nentes conceptuales que gobiernan el aprendizaje de los procedimientos del algoritmo (Fuson, 1998; Baro- ody, 2003) y b) La perspectiva sintctica, que centra su anlisis en torno a los mecanismos procesales (Res- nick, 1982) Palabras clave Algoritmos Sustraccin Clculo aritmtico ABSTRACT THE LEARNING OF SUBTRACTION During the learning of the subtraction algorithm certain errors arise and we classify them both quantitatively, on the basis of the results of the operations itself, and qual- itatively, from the analysis of the verbal productions that accompany the execution of calculations. We conduct- ed a pilot study with ten subjects to take note of the pro- ceedings and utterances issued during the task to ana- lyze the errors and their nature. We interpret the results according current theories on the subject, that follow two lines of research: a) Conceptual thinking, which em- phasizes the importance of the acquisition of conceptu- al components than govern the learning of algorithm procedures (Fuson, 1998, Barrody, 2003) and b) The syntactic perspective, which focuses its analysis on the procedural mechanisms (Resnick, 1982) Key words Algorithms Subtraction Arithmetic calculation BIBLIOGRAFA Baroody, A. (2003). The Development of Adaptive Expertise and Flexibility: The Integration of conceptual and Procedural Knowled- ge, en Baroody, A. J., Dowker, A. (eds.), The Developement of Arithmetic Concepts and Skills. Constructing Adaptive Expertise. Mahwah, NJ: Lawrence Erlbaum. Brown, J. y Burton, R. (1978). Diagnostic models for procedural bugs in Basic mathematical skills. Cognitive Science, 2, pp. 155-92.5 Brown, J. S., & VanLehn, K. (1980). Repair theory: A generative theory of bugs in procedural skills. 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Resultados: Diversos estudios reportan que la Procrastinacin Acadmica es un fenmeno comn entre estudiantes, variando los porcentajes de prevalencia de aqulla de un artculo a otro. Por otra parte, varios estudios sealan asociacio- nes especfcas entre Procrastinacin y Perfeccionismo en estudiantes. Discusin: Se comparan los diversos resultados hallados y se discute sobre la relevancia del estudio de la Procrastinacin en el mbito acadmico y su relacin con rasgos perfeccionistas. Palabras clave Procrastinacin Procrastinacin acadmica Perfeccio- nismo ABSTRACT ACADEMIC PROCRASTINATION AND ITS RELATIONSHIP WITH PERFECTIONISM Introduction: Procrastination has been defned as the fact of delaying the completion of a task that usually re- sults in a state of dissatisfaction or subjective discom- fort. Some authors suggest that procrastination is a common behavior among students and is associated to personality traits. Objective: To review the bibliography on procrastination in academic area and explore its re- lationship with perfectionism. Methodology: We per- formed a bibliographic search in the PubMed, PsycIN- FO and EBSCO databases. We reviewed articles pub- lished between 1990 and 2011 evaluating academic procrastination and secondarily its association with Per- fectionism. Results: Different studies report that the Ac- ademic Procrastination is a common phenomenon among students, changing the percentages of preva- lence from an article to another. Moreover, different studies suggest specifc associations between procras- tination and perfectionism in students. Discussion: We compared the different results and discussed the rele- vance of the study of procrastination in academic area and related traits perfectionists. Key words Procrastination Academic procrastination Perfectionism BIBLIOGRAFA 1. Burka, J. B., & Yuen, L. M. (1983). Procrastination: Why you do it and what to do about it. 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NORMAS LOCALES Sampedro, Mara Brbara Facultad de Psicologa, Universidad de Buenos Aires - Facultad de Filosofa y Letras, Univer- sidad de Buenos Aires - Hospital Interzonal General de Agudos Eva Pern - Consejo Nacional de Investigaciones Cientfcas y Tcnicas RESUMEN Introduccin Las lesiones cerebrales pueden afectar tanto la decodifcacin como la comprensin lectora. Ambas son necesarias para llegar al signifcado global de un texto. Hay pocos instrumentos destinados a eva- luar la comprensin lectora. Objetivo: Presentar los da- tos normativos en una poblacin de adultos de 3 prue- bas de evaluacin de la comprensin de textos espe- cialmente diseadas y el test TECLE (Marn y Carrillo, 1999; Cuadro, 2005). Metodologa: Se adapt la prueba TECLE y se disearon tres pruebas de evaluacin de la comprensin lectora, constituidas cada una por un tex- to y preguntas sobre el mismo con opciones de res- puesta mltiple. Para obtener los datos normativos, se aplicaron dichas pruebas a 360 sujetos adultos sin le- sin cerebral, hablantes nativos de espaol, de diferen- tes edades y escolaridades. Resultados: A partir de pro- cesar estadsticamente el rendimiento de cada grupo de edad y escolaridad se obtuvieron las medias de rendi- miento en cada prueba y medias de tiempo en las prue- bas de comprensin de texto. Se observaron diferen- cias entre grupos en el puntaje bruto y en los tiempos. Hemos obtenido un instrumento que nos permite eva- luar la comprensin lectora en sujetos adultos y evitar que la evaluacin de la lectura se reduzca solo a tareas de decodifcacin. Palabras clave Comprensin lectora Evaluacin Normas ABSTRACT READING COMPREHENSION ASSESSING BATTERY. LOCAL NORMS IN AN ADULT POPULATION Introduction Brain injuries can affect decoding and reading comprehension. Both are necessary to access the overall meaning of a text. There are few instru- ments to assess reading comprehension. Aim: To present the normative data in an adult population of 3 reading comprehension assessing tests specially de- signed and the test TECLE (Marin and Carrillo, 1999; Cuadro, 2005). Methodology: The test TECLE was adapted and 3 reading comprehension assessing tests 107 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA were designed, each consisting of a text and questions about it with multiple choice. For normative data, these tests were applied to 360 adult subjects without brain injury, native Spanish speakers, from different age and education. Results: We obtained the means of per- formance on each test and average time on tests of reading comprehension, according to each group of age and education. Differences were observed be- tween groups in scores and times. We have obtained a tool that allows us to assess reading comprehension in adult subjects and avoid the reading assessment tasks to be reduced only at decoding. Key words Reading comprehension Assessment Norms BIBLIOGRAFA Abusamra V, Ferreres A, Raiter A, De Beni R y Cornoldi C. Test Leer para Comprender. Buenos Aires: Paidos; 2010. Ferreres A. Evaluacin de las alteraciones de la lectura. En D Burin, M Drake y Harris P (Eds). Evaluacin neuropsicolgica en adultos. Buenos Aires: Paidos; 2007. p. 243-258. Ferreres A, Abusamra V, Casajs A, China N. Adaptacin y estu- dio preliminar de un test breve para evaluar la efcacia lectora (TECLE) Revista Neuropsicologa Latinoamericana 2011; 3 (2): 1-7. Goodglas H, Kaplan E y Barresi B. Test de Boston para el Diag- nstico de la Afasia. Tercera edicin. Buenos Aires: Editorial Mdica Panamericana; 2005. Marn J y Carrillo MS. Test Colectivo de Efcacia Lectora (TECLE). Murcia: Departamento de Psicologa Bsica y Metodologa, Uni- versidad de Murcia; 1999 (no publicado). Marn J, Cuadro A y Pagn A. Lxico ortogrfco y competencia lectora. Ciencias Psicolgicas 2007; 1 (1): 15-26. AGRADECIMIENTOS: Ingrid Daz, Micaela Difalcis, Natalia Escalante, Manuela Frers, Alejandra Mignani, Mara Clara Ronqui, Mara Rosa Snchez, Julia Otero. EVALUACIN DE UN GRUPO DE PACIENTES LESIONADOS DEL HEMISFERIO DERECHO CON UNA PRUEBA DE COMPRENSIN DE EXPRESIONES IRNICAS Y SARCSTICAS Sampedro, Mara Brbara Facultad de Psicologa, Universidad de Buenos Aires - Facultad de Filosofa y Letras, Univer- sidad de Buenos Aires - Hospital Interzonal General de Agudos Eva Pern - Consejo Nacional de Investigaciones Cientfcas y Tcnicas RESUMEN Introduccin: La irona y el sarcasmo constituyen dos formas de lenguaje no literal ampliamente utilizadas en la vida cotidiana, dado que contribuyen a que el criticis- mo de un sujeto se perciba de manera ms poltica y menos agresiva que en formas directas del lenguaje. Los lesionados del hemisferio derecho (LHD) pueden presentar alteraciones en las habilidades pragmticas, entre las que se encuentra la del procesamiento de ex- presiones no literales, tales como la irona y el sarcas- mo. Objetivo: Analizar el rendimiento de pacientes LHD y sujetos sin lesin en una prueba de evaluacin de la comprensin de expresiones irnicas y sarcsticas es- pecialmente diseada. Mtodo: Se dise una prueba de evaluacin de la comprensin de expresiones irni- cas y sarcsticas constituida por 40 estmulos. Fueron evaluados con dicha prueba 5 pacientes LHD y 5 suje- tos sin lesin y se compar el rendimiento de ambos grupos. Resultados: Se encontraron diferencias signif- cativas en el rendimiento de pacientes y controles en la prueba utilizada. Conclusin: Las diferencias en el ren- dimiento de ambos grupos sugieren que la prueba es til para discriminar entre casos y controles. Resulta im- portante considerar la comprensin de expresiones ir- nicas y sarcsticas en la evaluacin de pacientes LHD. Palabras clave Lesionados derechos Irona Sarcasmo ABSTRACT RIGHT HEMISPHERE DAMAGED PATIENTS ASSESSMENT WITH A TEST OF IRONIC AND SARCASTIC STATEMENTS COMPREHENSION. Introduction: Irony and sarcasm are two forms of nonlit- eral language widely used in everyday life, since they contribute to the criticism of a subject is perceived more polite and less aggressive than in direct forms of lan- guage. Right hemisphere damaged patients (RHD) may present disorders in pragmatic skills, among which is 108 NEUROPSICOLOGA Y PSICOLOGA COGNITIVA the processing of non-literal expressions, such as irony and sarcasm. Aim: Analyze the performance of RHD patients and subjects without injury in a test of ironic and sarcastic statements comprehension, specially de- signed. Method: A test of ironic and sarcastic state- ments comprehension consisting of 40 items was de- signed. Were evaluated with the test 5 RHD patients and 5 subjects without injury. The performances of both groups were compared. Results: Signifcant differences in the performance of patients and controls in the test used were found. Conclusion: Differences in the per- formance of both groups suggest that the test is useful to discriminate between cases and controls. It is impor- tant to consider the comprehension of ironic and sarcas- tic expressions in the evaluation of RHD patients. Key words Right brain-damaged Irony Sarcasm BIBLIOGRAFA Baron-Cohen S., Leslie A. M. y Frith U. (1985). Does the autistic child have a Theory of mind? Cognition, 21, 37-46. Brown P. y Levinson S. (1987). Politeness: Some universals in language usage. Cambridge: Cambridge University Press. Gibbs R. (2000). Irony in talk among friends. Metaphor and Sym- bol, 15, 5-27. Katz A.N. (2000). Introduction to the special issue: The uses and processing of irony and sarcasm. Metaphor and Symbol, 15, 1-3. McDonald S. 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2010 MEMORIAS-II-Congreso-Internacional-de-Investigacion-y-Practica-Profesional-en-Psicologia-XVII-Jornadas-de-Investigacion-Sexto-Encuentro-de-Investigado PDF
MEMORIAS II Congreso Internacional de Investigación y Práctica Profesional en Psicología XVII Jornadas de Investigación Sexto Encuentro de Investigadores en Psicología del MERCOSUR 22, 23 y 24 de noviembre de 2010
MEMORIAS II Congreso Internacional de Investigación y Práctica Profesional en Psicología XVII Jornadas de Investigación Sexto Encuentro de Investigadores en Psicología del MERCOSUR 22, 23 y 24 de noviembre de 2010