El qurum de lderes eficaz

POR EL LDER DALE E. MILLER

De los Setenta

El cuarto en una serie de artculos sobre los qurumes del
sacerdocio y sus objetivos.
Las Escrituras de nuestros das indican que los poseedores del sacerdocio han de establecer de nuevo a Sin, segn lo profetiz
Isaas (D. y C. 113:8; vase Isaas 52:1, 8). Esas mismas Escrituras tambin indican que los lderes han de ser ministros residentes
(D. y C. 124:137). Eso quiere decir que los presidentes de estaca y los obispos cuentan con que los qurumes de lderes sean fuertes
para llevar a cabo la misin de la Iglesia invitar a todos a venir a Cristo y perfeccionarse en l proclamando el Evangelio,
perfeccionando a los santos y redimiendo a los muertos.
Las dificultades para lograr que un qurum sea fuerte son muy grandes. El qurum est en un estado de constante cambio y es
probable que no haya suficientes miembros activos para cumplir con todas las asignaciones de orientacin familiar; los hombres
conversos con frecuencia se mudan o no se pueden encontrar; por lo general, son ms los futuros lderes que los lderes activos. Los
que son fieles tienen muchas veces que viajar o mudarse por razones de trabajo o por sus estudios. A algunos se les ordena sumos
sacerdotes o se les dan asignaciones importantes fuera del qurum. As que la interrogante es: cmo puede aumentar su fortaleza un
qurum de lderes que est continuamente cambiando?
El presidente Stephen L Richards (1879 1959), Primer Consejero de la Primera Presidencia, ense lo siguiente: Un qurum es tres
cosas: primero, una clase; segundo, una fraternidad; y tercero, una unidad de servicio. En el qurum los hombres del sacerdocio
aprenden los principios del Evangelio, establecen una verdadera hermandad y llevan adelante la obra de Cristo. Es una asociacin
dada por Dios de la cual sacan un provecho ms duradero que de cualquier otra organizacin fraternal de nuestra sociedad. Su objetivo
principal es alentar y salvaguardar al individuo
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.
Segn la definicin del presidente Richards, la forma de lograr un qurum fuerte es:
1. 1.
Fortalecer los lazos de hermandad entre todos los miembros del qurum.
2. 2.
Aprender las doctrinas fundamentales y los deberes del sacerdocio.
3. 3.
Cumplir asignaciones de servicio en las que participe todo el qurum.
A continuacin, se dan unas cuantas sugerencias prcticas para llevar a cabo esas actividades que fortalezcan al qurum:
1. Fortalecer los lazos de hermandad entre todos los miembros del
qurum.
I ncluyan a todos los miembros del qurum que estn asignados. Ninguno debe ser excluido, sean cuales sean las circunstancias. El
presidente Boyd K. Packer, Presidente en Funciones del Qurum de los Doce Apstoles, ha dicho: l [el miembro del qurum] puede
perder inters en el qurum, pero el qurum nunca debe perder inters en l, porque siempre y continuamente es responsable de cada
uno de sus miembros. El dejar de lado a un miembro inactivo, perder el inters y el contacto con l es quitarle sus derechos como
poseedor del sacerdocio
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.
Visiten. Visiten. Visiten. Las presidencias de qurumes de lderes por todo el mundo afirman que sus visitas personales tienen un
impacto duradero para integrar a todos los miembros a la hermandad del qurum. Esas visitas son mejor recibidas cuando se
consideran acciones de amistad verdadera y de sincero inters. Muchas veces, se extiende la invitacin para participar activamente en
el qurum y se deja en el hogar una bendicin al orar de rodillas.
Asignen tareas a cada uno de los miembros. El presidente Hinckley destac lo siguiente: Si su objetivo se va a realizar, todo qurum
debe ser una hermandad que se esfuerza por beneficiar a cada uno de los miembros
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. Esto se relaciona ciertamente con su
admonicin de que todo nuevo converso (y miembro de qurum) necesita tener una responsabilidad. A todo miembro le hace falta el
constante alimento espiritual que se recibe por prestar servicio a quien est necesitado.
2. Aprender las doctrinas fundamentales y los deberes del
sacerdocio.
Aprendan de los lderes. El presidente de un qurum de lderes debe ensear lo que l aprenda a los miembros de su qurum. Durante
la semana quiz reciba enseanzas del Espritu en forma de pensamientos o sentimientos; debe anotarlas. Cuando est en presencia de
la presidencia de la estaca, del obispado, del miembro del sumo consejo asesor de su barrio o en reuniones de liderazgo, debe
preguntarse: Qu estoy aprendiendo aqu que deba ensear a mis hermanos del qurum?. Si guarda sus apuntes y los edita, se le
presentarn oportunidades de compartirlos en las reuniones del qurum, en las entrevistas o en momentos especiales en que aconseje a
alguien.
En las Escrituras, se asigna al presidente del qurum de lderes el deber de sentarse en concilio con ellos [los miembros del qurum]
y ensearles de acuerdo con los convenios (D. y C. 107:89; vase tambin D. y C. 20:3845). La accin de sentarse en concilio puede
realizarse en forma privada durante las visitas a la casa o en entrevistas peridicas, o puede hacerse con todo el grupo del qurum.
Aprendan de los que ensean. El inters y la asistencia de los miembros del qurum son, en parte, una funcin de la enseanza y del
aprendizaje eficaces. Aun cuando muchos asistan por respeto a los convenios que hayan hecho, otros deciden participar basndose en
el valor que den a las lecciones presentadas. Los maestros deben preparar y presentar las lecciones teniendo en cuenta las necesidades
de los miembros y su participacin. Tambin deben ensear con autoridad y gua espirituales, segn se explica en la seccin 50 de
Doctrina y Convenios (vanse los versculos 1025): De manera que, el que la predica [por el Espritu] y el que la recibe [por el
Espritu] se comprenden el uno al otro, y ambos se regocijan juntamente (D. y C. 50:22).
3. Cumplir asignaciones de servicio en las que participe todo el
qurum.
Promuevan la autosuficiencia temporal entre los miembros del qurum. El presidente J. Reuben Clark, hijo (18711961), Primer
Consejero de la Primera Presidencia, aconsej diciendo que el obispo mira a toda persona necesitada como un problema temporario,
preocupndose por ellos hasta que puedan ayudarse a s mismos. Pero el sacerdocio [el qurum] debe contemplar a sus hermanos
necesitados como un problema continuo, no slo hasta que sean resueltos sus problemas temporales sino tambin los espirituales.
Como un ejemplo concreto, un obispo extiende su ayuda mientras el artesano se encuentre sin trabajo y en necesidad; el qurum del
sacerdocio le ayuda a conseguir un empleo y se asegura de que no tenga problemas hasta que pueda bastarse a s mismo y sea activo
en sus deberes del sacerdocio
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.
Organicen un sistema de orientacin familiar que sea realizable. El lder L. Tom Perry, del Qurum de los Doce Apstoles, ofreci
un valioso consejo en la reunin mundial de capacitacin de lderes, el 11 de enero de 2003. Se refiri a las unidades pequeas de la
Iglesia; el consejo es tambin aplicable si el nmero de maestros orientadores disponibles es limitado. Se debe asignar a stos de
acuerdo con lo que se necesite, concentrndose en primer lugar en los conversos nuevos. Tal vez por un tiempo no sea posible hacer
las visitas a todos los miembros. El consejo del lder Perry es: Si como lderes del sacerdocio no consiguen nada ms que ayudar a
los miembros a guardar los convenios que hayan hecho con el Seor, ya habrn logrado en gran medida lo que se espera de ustedes
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.
El presidente Spencer W. Kimball (18951985) tal vez haya definido mejor la esencia de la orientacin familiar cuando dijo: La
tendencia de estos tiempos es la mundanalidad Pero el Seor ha ofrecido un programa antiguo con cubiertas nuevas, que promete
devolver al mundo la vida sana, la verdadera vida de familia, la dependencia mutua de sus miembros. Es volver a colocar al padre en
su lugar correcto como jefe de la familia, sacar a la madre de la vida social y del empleo y llevarla al hogar, y a los hijos de una vida
de pura diversin. Si la gente aplica el remedio, el programa de orientacin familiar con su actividad principal, la noche de hogar,
neutralizar los efectos nocivos
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.
stas son apenas unas pocas sugerencias para ayudar a los lderes a formar un qurum fuerte. Somos sumamente bendecidos al tener
constantes consejos de los apstoles y profetas actuales. El presidente Boyd K. Packer ha mencionado las respuestas que se encuentran
en los manuales de instrucciones de la Iglesia, en las Escrituras, en los consejos pasados de los profetas vivientes, y en las llaves y en
el derecho a recibir continua revelacin personal
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. Al continuar aprendiendo y aplicando las enseanzas de los profetas vivientes y de
nuestros lderes locales, magnificamos nuestros llamamientos y tambin nuestro propio desarrollo espiritual.
Los qurumes de lderes merecen encomio por la gran obra que realizan de establecer de nuevo a Sin, cumpliendo as las profecas
de preparar a los santos para venir a Cristo y a su Dios. Que Dios los bendiga abundantemente en sus esfuerzos.
Comentarios sobre los qurumes del sacerdocio
Ser un da maravilloso, hermanos aqul en el que los qurumes del sacerdocio se transformen en un ancla de fortaleza para cada
uno de los hombres que participen, aqul en el que cada hombre pueda decir con propiedad: Soy miembro de un qurum del
sacerdocio de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los ltimos Das. Estoy listo para ayudar a mis hermanos en todas sus
necesidades, tal como confo en que ellos estn listos para ayudarme a m en las mas. Trabajando juntos podremos enfrentarnos, sin
vergenza y sin miedo, a todo viento de adversidad que nos azote, ya sea econmico, social o espiritual .
Presidente Gordon B. Hinckley. Vase Los qurumes del sacerdocio en el Plan de Bienestar, Liahona, febrero de 1978, pg. 125.
Gratitud por el qurum de lderes
Mi padre se convirti a la Iglesia cuando estaba de novio con mi madre. Fue ordenado lder y estuvo activo durante un perodo corto;
despus se apart de la Iglesia.
Durante unos cincuenta aos, no tuvo contacto oficial con la Iglesia, porque se haba mudado muchas veces. Pero cuando tena
ochenta y dos aos, viva solo en California y sufra de mala salud, dos hombres llamaron a su puerta un domingo por la maana y le
dijeron: Vinimos para llevarlo a la reunin del sacerdocio.
l qued muy agradecido de que alguien hubiera hecho el esfuerzo por acercarse y ofrecerle amistad. Aquellos hombres llevaron a mi
padre a la Iglesia, algo que ninguno de sus tres hijos activos haba conseguido excepto en ocasiones especiales. Aqullos eran buenos
ejemplos de la forma en que los miembros de un qurum del sacerdocio deben buscar a los que estn necesitados. Mi familia estar
para siempre agradecida a los hombres de aquel qurum.
lder Dale E. Miller, de los Setenta.
Notas
1. 1.
En Conference Report, oct. de 1938, pg. 118.
2. 2.
En A Royal Priesthood, Gua personal de estudio del Sacerdocio de Melquisedec, 1975, pg. 134.
3. 3.
Welfare Responsibilities of the Priesthood Quorums, Ensign, nov. de 1977, pg. 86.
4. 4.
Citado por Gordon B. Hinckley en Los qurumes del sacerdocio en el Plan de Bienestar; vase Liahona, febrero de 1978, pgs. 123124.
5. 5.
Vase El programa de la unidad bsica, Primera reunin mundial de capacitacin de lderes, 11 de enero de 2003, pgs. 710.
6. 6.
En Conference Report, abril de 1965, pg. 61.
7. 7.
Vase La restauracin, Primera reunin mundial de capacitacin de lderes, 11 de enero de 2003, pgs. 14.
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