Este documento describe el papel de los medios de comunicación en la Primera Guerra Mundial. Los países beligerantes inundaron sus naciones con propaganda en forma de panfletos, carteles, caricaturas y películas para movilizar a la población. Los Aliados fueron más efectivos en su propaganda que los alemanes. Al final de la guerra, los ciudadanos europeos descubrieron la magnitud de las mentiras y manipulaciones de las que habían sido víctimas a través de los medios.
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Este documento describe el papel de los medios de comunicación en la Primera Guerra Mundial. Los países beligerantes inundaron sus naciones con propaganda en forma de panfletos, carteles, caricaturas y películas para movilizar a la población. Los Aliados fueron más efectivos en su propaganda que los alemanes. Al final de la guerra, los ciudadanos europeos descubrieron la magnitud de las mentiras y manipulaciones de las que habían sido víctimas a través de los medios.
Este documento describe el papel de los medios de comunicación en la Primera Guerra Mundial. Los países beligerantes inundaron sus naciones con propaganda en forma de panfletos, carteles, caricaturas y películas para movilizar a la población. Los Aliados fueron más efectivos en su propaganda que los alemanes. Al final de la guerra, los ciudadanos europeos descubrieron la magnitud de las mentiras y manipulaciones de las que habían sido víctimas a través de los medios.
Este documento describe el papel de los medios de comunicación en la Primera Guerra Mundial. Los países beligerantes inundaron sus naciones con propaganda en forma de panfletos, carteles, caricaturas y películas para movilizar a la población. Los Aliados fueron más efectivos en su propaganda que los alemanes. Al final de la guerra, los ciudadanos europeos descubrieron la magnitud de las mentiras y manipulaciones de las que habían sido víctimas a través de los medios.
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Los medios de comunicacin en la Gran Guerra:
Todo por la Patria
Ingrid Schulze Schneider Universidad Complutense de Madrid ingrid@ccinf.ucm.es Recibido: 20 de junio de 2013 Aceptado: 10 de julio de 2013 Resumen En la Primera Guerra Mundial, los medios de comunicacin jugaron, por primera vez en la Historia, un papel importante en el desarrollo de una guerra. Un verdadero diluvio de panfetos, carteles, caricaturas, poemas, canciones y, tambin, pelculas cinematogrfcas inundaba los pases beligerantes. Los aliados disearon su propaganda con mucho ms efcacia que los alemanes, prisioneros de un Estado autoritario que crea innecesario una movilizacin de su poblacin, acostumbrada a obedecer las consignas guber- namentales sin cuestionarlas. No fue hasta el fnal de la guerra, que los ciudadanos europeos descubrie- ron la magnitud de las mentiras y de la manipulacin de la que haban sido vctimas. Palabras clave: Primera Guerra Mundial; propaganda; medios de comunicacin. The Mass Media in the Great War: Everything for Our Country Abstract In the First World War the mass media played, for the frst time in History, an important role in the development of a war. A real deluge of pamphlets, cartels, cartoons, poems, songs and, also, movies, was fooding the belligerent countries. The allies designed their propaganda with much more skill that the Germans, prisoners of an authoritarian State that believed unnecessarily a mobilization of his popu- lation, accustomed to obeying the governmental slogans without questioning them. It was not until the end of the war, that the European citizens discovered the magnitude of the lies and of the manipulation of which they had been victims. Key words: First World War; Propaganda; Mass Media. Referencia normalizada Schulze Schneider, I. (2013). Los medios de comunicacin en la Gran Guerra: Todo por la Patria. Histo- ria y Comunicacin Social, vol. 18, pginas 15-30. Sumario: 1.Introduccin. 2. La propaganda cientfca. 3. La guerra de Cultura. 4. Los medios de comu- nicacin. 4.1. Panfetos y carteles. 4.2. Las caricaturas. 4.3. La fotografa y el cine. 4.4. Campaas de atrocidades. 5. Conclusiones: Consecuencias nefastas para el porvenir. 6. Bibliografa. 1. Introduccin La Primera Guerra Mundial fue la primera guerra total en la Historia contempo- rneo, que se llev a cabo no solamente contra los ejrcitos enemigos sino, tambin, contra las poblaciones civiles y ello en todos los mbitos: militares, econmicos y Historia y Comunicacin Social Vol. 18 (2013) 15-30 15 ISSN: 1137-0734 http://dx.doi.org/10.5209/rev_HICS.2013.v18.43411 propagandsticos. Su estallido fue saludado inicialmente por la mayora de las nacio- nes participantes, que creyeron que la contienda sera breve y que servira para solu- cionar una serie de problemas y enfrentamientos europeos, que haban llegado a un callejn sin salida. Aparte de la causa directa de la declaracin de guerra de Austria a Serbia -el asesinato del archiduque Francisco Fernando y su esposa por un naciona- lista bosnio en Sarajevo el 28 de junio de 1914 -, haba otras razones que precipitaron la entrada progresiva de casi todos los pases europeos en el conficto. Finalmente, los Estados contendientes seran Alemania, el Imperio Austro-Hngaro, Turqua y Bulgaria contra Francia, Inglaterra, Rusia, Serbia, Blgica, Italia, Japn, Rumana, Portugal y, en la fase fnal, Grecia y los Estados Unidos de Amrica. Entre las causas mltiples del enfrentamiento pueden sealarse las siguientes: las rivalidades entre los Estados europeos por sus ambiciones imperialistas; las carreras de armamentos entre las grandes potencias, la rivalidad anglo-alemana por la supremaca naval, las difcultades internas del Imperio austro-hngaro; la poltica rusa en los Balcanes; la prdida del carcter defensivo de las alianzas europeas; el revanchismo francs y el nacionalismo alemn. La guerra que se crea corta, pero la cruda realidad super con creces las previsiones de los ms optimistas. Despus de la primera batalla del Marne en septiembre de 1914, el estancamiento del frente oblig a cavar miles de kilmetros de trincheras, paralelas a la lnea del frente occidental. Para romper esta nueva situacin y forzar el giro de la guerra se introdujeron nuevos ingenios milita- res, incluyendo, entre otros, las granadas de mano, el gas venenoso, morteros de trin- chera, cortinas y barreras de fuego artillero y lanzallamas. En consecuencia, despus de cada intento de la infantera por avanzar contra el adversario, las bajas fueron enormes en ambos bandos. El desgaste psicolgico en tan dramtica situacin oblig a los gobiernos de los contendientes a buscar y emplear otra arma, con el fn de dar valor a sus tropas y de desmoralizar, al mismo tiempo, al enemigo. La propaganda cientfca iba a cumplir este papel. 2. La propaganda cientfca La propaganda empleada durante la Primera Guerra Mundial ha sido objeto de mltiples estudios, algunos de ellos ya convertidos en clsicos de referencia obligada, como el del norteamericano Harold Lasswell, escrito en la temprana fecha de 1923. En 1982, los britnicos L. Sanders y Philip M. Taylor actualizaron el tema en su libro British Propaganda during the First World War 1914-1918, utilizando fuentes de archivos entonces inditos Su obra ha servido de base entre otros - a los exce- lentes trabajos espaoles de Jess Timoteo lvarez (1983) y de Alejandro Pizarroso Quintero (1990). En todas las obras citadas se pone de relieve el cambio que sufre la informacin durante la primera gran confagracin del siglo XX, convirtindose en una cuestin poltica de mxima importancia que los gobiernos implicados no quie- ren dejar en manos de los dueos de los medios de comunicacin. Los conocimientos sociolgicos y psicolgicos adquiridos desde fnales del siglo XIX y principios del XX fueron utilizados, profusamente para infuir en las concien- Ingrid Schulze Schneider Los medios de comunicacin en la Gran Guerra 16 Historia y Comunicacin Social Vol. 18 (2013) 15-30 17 Historia y Comunicacin Social Vol. 18 (2013) 15-30 cias de los combatientes y de la poblacin civil a favor de las polticas respectivas, algunas veces con argumentos que hoy en da pueden parecernos muy artifciales. El ejemplo ms claro es la guerra de la cultura, a la que nos referiremos ms adelante. La Primera Guerra Mundial marc el comienzo de una nueva era en lo que respecta al control que tenan los pases combatientes sobre la informacin que se publicaba en el mismo pas o en el extranjero, y tambin en relacin con la organizacin formal de la propaganda. Las campaas que se iniciaron en 1914 adquirieron dimensiones hasta entonces desconocidas. Un verdadero diluvio de panfetos, carteles, caricaturas, fotografas, y, fnalmente, tambin, pelculas inund los pases participantes en la guerra, desencadenando y exacerbando odios viscerales que llegaron a veces hasta la histeria. Al margen de los esfuerzos propagandsticos realizados en el propio pas, haba que defender la causa en el extranjero. Los aliados tenan grandes ventajas en este aspecto, ya que estaban mejor organizados que los pases centrales y que domi- naban tambin las conexiones martimas, vetadas para los germanos por el bloqueo martimo ingls. La propaganda aliada tena mucho ms fuerza gracias al empleo de las imgenes de supuestas atrocidades de los alemanes, que eran mostradas al mundo. Fotografas reales y trucadas, y panfetos de toda clase mostraban a los brbaros hunos quemando casas , violando mujeres y descuartizando nios, suscitando un odio generalizado contra el pueblo del Kaiser tambin en los pases neutrales. En el plano interno, las proclamas patriticas, tuvieron eco en los partidos pol- ticos, hasta entonces enfrentados, en todos los pases implicados. En Alemania se estableci el llamado Burgfrieden (paz del burgo) siguiendo la mxima del empe- rador Guillermo II: No conozco ningn partido poltico, sino solamente alemanes (Demm, 1988:6). En otros pases se tomaron medidas similares como la Unin sacre francesa, lo que signifcaba el fnal temporal de las luchas de clases para proteger la patria. Las caricaturas ocuparon un nuevo lugar en los medios de comu- nicacin. Tenan que movilizar moral y espiritualmente a la poblacin para la guerra, disculpar derrotas y tapar problemas como la falta de abastecimiento, con el fn de fortalecer la creencia en la propia superioridad y la esperanza en la victoria fnal. 3. La guerra de Cultura El socilogo y economista germano Werner Sombart califc a la Primera Guerra Mundial como una guerra de creencias. Otros autores utilizaron las expresiones de guerra de cultura o guerra de cosmovisiones. Segn estos pensadores, el desenlace del enfrentamiento militar entre las potencias centroeuropeas y los aliados pondra, tambin, de manifesto la superioridad del orden social y poltico de unos u otros combatientes: Demm (1988:13). En el plano propagandstico, esta guerra de cultura se desarroll fundamen- talmente entre Alemania y los aliados occidentales. Franceses, ingleses y, tambin, italianos, vean en Alemania un pas sin libertades, imbuido de militarismo y cesa- rismo. Las campaas propagandsticas de aquellos pretendan ser una cruzada a favor Ingrid Schulze Schneider Los medios de comunicacin en la Gran Guerra de la civilizacin y de la democracia. Los alemanes podan, difcilmente, conde- nar valores basados en las libertades pblicas, por lo que recurrieron a una tctica empleada ejemplarmente por Thomas Mann en sus Betrachtungen eines Unpoli- tischen (Observaciones de un hombre apoltico), califcando a las democracias occidentales como caduco parlamentarismo de abogados y plutocracias, que slo servan para discusiones infructuosas que traicionaban los verdaderos deseos del pueblo. Alemania no poda ofrecer a sus ciudadanos libertad, igualdad y frater- nidad como Francia; tampoco poda usar el recurso ruso de unir bajo la bandera del paneslavismo a todos los pueblos eslavos con el fn de liberar a los proletarios. Mien- tras los ingleses justifcaban su participacin en la guerra con la misin de defender a la pequea Blgica, los intelectuales alemanes, apoyados por los suecos Rudolf Kjelln, Gustavo Steffen, y el idelogo racista ingls Houston Stewart Chamberlain, se esforzaron por hallar pensamientos especfcamente germanos con que enfrentarse verbalmente a sus enemigos. El resultado fueron las ideas de 1914: libertad enten- dida como libertad alemana en el sentido de la entrega del individuo a la sociedad, a la Volksgemeinschaft. Esta concepcin justifcaba la exigencia de valores autoritarios tpicamente prusianos, como el cumplimiento del deber, el orden y la disciplina, ideas que Hitler usara despus como claves de su propaganda en el III Reich. El origen del inslito duelo protagonizado por algunos intelectuales alemanes y sus colegas del bando contrario sobre la primaca de la Civilizacin, trmino con el que se defendas los valores de las democracias occidentales, o de la Kultur germnica, se encuentra en un episodio protagonizado tiempo atrs por el emperador Guillermo II, episodio que dio lugar a uno de los eptetos propagandsticos ms empleados contra los alemanes durante la guerra: los hunos. El origen de estos atributos se encuentra en un discurso que el Kiser pronunci el 27 de julio de 1900, con ocasin de la despedida de un cuerpo expedicionario destinado a China con el fn de derrotar el levantamiento de los Boxers, que haba costado la vida del embajador germano Klemens Freiherr von Ketteler. Guillermo II, famoso por su escaso tacto diplomtico, dijo en su alocucin a los soldados, entre otras, las siguientes frases: Mantened el viejo valor prusiano. Mostraos como buenos cristianos en sopor- tar alegremente vuestros sufrimientos. Qu el honor y la fama sigan vuestras bande- ras y armas! Dad al mundo un ejemplo de hombras y de disciplina. Vosotros sabis muy bien, que tenis que luchar contra un enemigo astuto, valiente, bien armado y cruel. Cuando os encontris con l, debis saber. No hay perdn, no se hacen prisio- neros. Tal como hace mil aos los hunos bajo el rey Etzel se hicieron un nombre que todava hoy aparece imponente en la historia y la leyenda, as al nombre alemn debe sonar en China durante mil aos por vuestra accin. () Abrid de una vez para siempre el camino a la cultura! () (Schulze Schneider, 1997: 693). Era evidente, que Guillermo II se inspiraba en la leyenda germana de los Nibelun- gos, segn la cual Krimilda se casa despus de la muerte de su esposo Sigfrido con el rey de los hunos, Etzel (Atila), en la esperanza de que ste pueda servirle de instru- mento en su venganza contra los asesinos de su esposo, como as suceder. El Kaiser no fue el nico en extraer de la epopeya germnica valores positivos de Atila. Con anterioridad, el dramaturgo Friedrich Hebbel (1861) traz en su triloga Ingrid Schulze Schneider Los medios de comunicacin en la Gran Guerra 18 Historia y Comunicacin Social Vol. 18 (2013) 15-30 Los Nibelungos (1861) una imagen muy favorecedora de Atila. Evidentemente, los propagandistas aliados que utilizaran la comparacin de los alemanes con los hunos, no vean a stos como un pueblo heroico, sino como feras sanguinarias, gente brbara desconocedora de las leyes ms elementales de la civilizacin. La torpeza del Kaiser haba servido en bandeja un argumento valiossimo a los aliados para denunciar la segn ellos retrgrada cosmovisin germnica del imperio guillermino. Numero- sos refranes y caricaturas, llenos de escarnio y de mofa, dan fe del enorme impacto causado en todo el mundo por la equiparacin del pueblo alemn con los hunos. 4. Los medios de comunicacin. 4.1. Panfetos y carteles La Gran Guerra es la primera que se desarrolla en los medios de comunicacin de masas en los pases beligerantes y, tambin, en los que se mantenan neutrales. Podemos distinguir, bsicamente, dos tipos de publicaciones, por un lado las octavi- Ingrid Schulze Schneider Los medios de comunicacin en la Gran Guerra Llamadas al reclutamiento para el ejrcito y la marina norteamericanas 19 Historia y Comunicacin Social Vol. 18 (2013) 15-30 llas incluidas en los diarios y las ediciones especiales de los peridicos, que estaban pensadas para la informacin interior, y los panfetos destinados nicamente al adver- sario. Cualquier edicin especial quiere demostrar, generalmente, la actualidad de un peridico, y la guerra ofreca para ello muchsimas ocasiones, especialmente cuando se trataba de comunicar victorias. Como ya sealamos, en 1914-1918, las octavi- llas propagandsticas eran empleadas por primera vez de forma sistemtica y masiva como un medio de guerra psicolgico por los aliados. Los alemanes tardaron en darse cuenta de su efcacia y solamente hicieron uso de ellas a partir de mediados de 1918, cuando la guerra ya estaba perdida. En junio de 1918, cayeron sobre las lneas alemanas 1,7 millones de estos panfetos, en julio del mismo ao fueron arrojados 2,2 millones y en octubre unos 5,4 millones. Como en 1870 en el asedio a Pars, las octavillas fueron transportadas con globos o granadas construidas especialmente para ese fn. Se calcula que la tirada total de panfetos alcanz en Francia 43,3 millones, en Inglaterra 18,3 millones y en Estados Unidos tres millones de ejemplares. (Schulze Schneider, 1999: 171). Ingrid Schulze Schneider Los medios de comunicacin en la Gran Guerra Llamada al reclutamiento en Gran Bretaa Llamada a comprar bonos de guerra en Alemania 20 Historia y Comunicacin Social Vol. 18 (2013) 15-30 Ingrid Schulze Schneider Los medios de comunicacin en la Gran Guerra Llamada a comprar bonos de guerra en Gran Bretaa Lucha contra el guila de los boches y la tuberculosis en Francia La independencia de Polonia vista por Punch La liberacin de Polonia vista por la revis- ta alemana Der wahre Jacob 21 Historia y Comunicacin Social Vol. 18 (2013) 15-30 Otro soporte propagandstico importante fueron los carteles. A fnales del siglo XIX stos se haban convertido en un importante medio de publicidad comercial. Grandes artistas de la poca como Toulouse-Lautrec, Chre y Mucha, no desdearon este medio para expresar su fuerza creativa. La gente se acostumbr a ver grandes anuncios en las vallas erigidas para tapar edifcios ruinosos o en construccin. Los gobiernos se percataron del valor de estas superfcies y las llenaron con mensajes destinados a recaudar fondos para la guerra, encontrar voluntarios para el ejrcito, apelando al espritu de colaboracin y de sacrifcio del pueblo. Millones de estos carteles eran emplazados en todos los pases beligerantes, siendo ms numerosos en Estados Unidos, donde alcanzaron gran popularidad. Siguiendo consignas puntua- les, los carteles versaban sobre aspectos sanitarios, formas de ahorrar combustible; normas de proteccin ante los bombardeos y, sobre todo, llamadas al reclutamiento voluntario. (Iglesias Rodrguez, 1997:18). Los reclamos ms famosos, como el yankee que seala con el dedo ndice I want youvolveran a ser utilizados en la Segunda Guerra Mundial. Otra consigna de gran xito tras la entrada de los Estados Unidos en la guerra en 1917 fue la llamada: Wake up Amrica, civilisation calls. En las tres campaas gubernamentales organizadas para la venta de bonos de la libertad, se imprimieron un total de 16 millones de ejemplares. En Francia, la propaganda en los carteles insista en que la destruccin del Imperio alemn era para los franceses una cuestin de supervivencia y una obra meritoria para el mundo civilizado. El quebrantamiento de la neutralidad belga por tropas germanas y la supuesta comisin de atrocidades por los soldados alemanes fueron temas muy socorridos. Los carteles alemanes, por el contrario, entendan poco de la psicologa de masas. Eran bastante burdos y dedicados, fundamentalmente, a ridiculizar al enemigo. La dureza de la guerra se esconde y los luchadores en el frente se mitifcan. Los gobiernos alemanes no entendan nada de estrategias psicolgicas de guerra, porque partan de la conviccin de que el pueblo deba obediencia a las autoridades, por lo que motivaciones adicionales no eran necesarias. Aunque con el transcurso de la contienda, los carteles mostraban aspectos ms realistas, los responsables se dieron cuenta demasiado tarde de que sus estrategias propagandsticas no haban alcanzado los efectos deseados. 4.2. Las caricaturas La prensa fue una gran colaboradora de las autoridades aliadas. Todos los peri- dicos se pusieron al servicio de la poltica. Al margen de los diarios serios forecan las revistas grfcas de caricaturas que alcanzaron un xito extraordinario. Las vie- tas publicadas eran cuidadosamente preparadas siguiendo reglas propagandsticas determinadas. Especialmente los reyes y polticos del adversario se convirtieron en vctimas del escarnio de los dibujantes. Con ello conseguan dirigir el odio contra una persona concreta, y las cualidades negativas adjudicadas a sta eran trasladadas al Ingrid Schulze Schneider Los medios de comunicacin en la Gran Guerra 22 Historia y Comunicacin Social Vol. 18 (2013) 15-30 pueblo entero. El Kaiser fue el personaje ms retratado, siempre como un sujeto inhumano, maquiavlico, capaz de las peores fechoras. Ingrid Schulze Schneider Los medios de comunicacin en la Gran Guerra La bestia de Berln, cartel de Norman Lindsay Anuncio de la pelcula La bestia de Berln en el teatro Broadway El monstruo avanza, el monstruo debe ser parado (Vieta annima) 23 Historia y Comunicacin Social Vol. 18 (2013) 15-30 Haba, tambin caricaturas sociales, que representaban escenas de la vida diaria, refejando la supuesta superioridad cultural del pas propio en sus tradiciones y costumbres, as como el talante caritativo y humanitario de sus habitantes. Por el contrario, los enemigos retratados eran brbaros que no respetaban las reglas ms elementales de una sociedad civilizada. Todos los dibujos tenan el mismo fn: forta- lecer, por un lado, la moral de civiles militares, aliviando con la risa las tensiones y el dramatismo de la guerra y, por otro, canalizar el odio en una sola direccin, hacin- dolo ms cmodo para el pueblo y ms fcilmente dirigible para sus autoridades (Demm, 1988:6-11). 4.3. La fotografa y el cine Tambin la fotografa fue un gran medio propagandstico de la guerra. En 1904, el Daily Mirror ingls haba sido el primero en abandonar el grabado tradicional por las fotos. Diez aos despus, cuando estalla la crisis que desencadena la Primera Guerra Mundial, se publica en sus primeras pginas una fotografa en la que se ve al archiduque Francisco Fernando de Austria momentos antes de su asesinato. Los mili- tares comprendieron muy bien, que la fotografa poda ser un arma de manipulacin muy poderosa, por lo que los gobiernos decidieron controlar las fotos que podan dar informaciones al enemigo o desmoralizar a los civiles. Entretanto se crearon las secciones cinematogrfcas y fotogrfcas de los ejrcitos, encargadas de proporcionar imgenes sobre todo aquello que poda ofrecer una imagen favorable de la potencia material y moral del ejrcito propio. Se contrataron fotgrafos profesionales a los que se dio el rango de ofciales y se les permiti llegar hasta los frentes de batalla. Alema- nia, pionera tcnica en el campo de la fotografa, mantena una media de 50 operado- Ingrid Schulze Schneider Los medios de comunicacin en la Gran Guerra Vietas alemanas sobre el supuesto generoso comportamiento de sus soldados en el frente del Este 24 Historia y Comunicacin Social Vol. 18 (2013) 15-30 res ofciales en el escenario blico occidental. Francia, preocupada por apoyar la lucha nacional contra el invasor tena unos 35. Gran Bretaa, por el contra- rio solo contaba con una media de 4 periodistas. En el frente oriental, el control estaba menos organizado y el reportero profesional dispona de muchas ms oportunidades, siempre y cuando su peridico estu- viera dispuesto a fnan- ciarle. En toda Europa la demanda de testimonios visuales fue tal que los ciudadanos hacan cola para comprar las imgenes. Aunque todos saban que las fotos slo representa- ban una visin parcial del conficto, habra que espe- rar al regreso de los solda- dos de a pie para descu- brir el inferno que haban vivido. En cuanto al cine, ya en torno a 1910 los produc- tores de pelculas, espe- cialmente en los Estados Unidos y Francia, se perca- taron de que el nuevo arte no slo serva para entretener a la gente sino, tambin, para manipularlas. El clima preblico existente en las relaciones franco-germanas desde haca ya algunos aos antes del comienzo de la Primera Guerra Mundial se puedo comprobar perfectamente, contemplando las pelculas francesas de esos aos que presentan a los boches (cerdos) como asesinos salvajes de nios y de mujeres. Las autoridades germanas tardaron bastante en tomar cartas en el asunto, porque las lites culturales y fnancieros del pas despreciaban el cine considerado nicamente un medio para entretener a las masas incultas. La ridiculizacin del Kaiser Guillermo en numerosas cintas tanto francesas como americanas no cambiara nada. La plebe Ingrid Schulze Schneider Los medios de comunicacin en la Gran Guerra Pelcula: The Heart of Humanity. Intento de violacin por parte del soldado alemn Pelcula: Die Entdeckung Deutschlands: Los marcianos descubren los teletipos mentirosos de Reuter 25 Historia y Comunicacin Social Vol. 18 (2013) 15-30 germana segua viendo produc- tos extranjeros, mientras la alta sociedad no acuda a los locales cinematogrfcas para evitar segn un autor de la historia de la UFA el riesgo de tener que sentarse en los mismos bancos que su doncella. Tras el comienzo de la guerra el 1 de agosto de 1914 la situacin cambi de golpe: Ninguna pelcula extranjera poda traspasar la frontera, tampoco los noticiarios. Los productores alemanes no esta- ban preparados para suministrar sufciente material. Muchos cines tuvieron que cerrar. La propaganda anti-germana arre- ciaba Cuando se proyectaba la pelcula La bestia de Berln referida a Guillermo II en los cines de los aliados, se rogaba a los visitantes antes de la proyec- cin no disparar a la pantalla, pero s tenan permiso para arrojar basura al cartel anuncia- dor de la pelcula. Solamente a partir de 1916 y de forma muy lenta y defciente comenzaban las autoridades militares y fnancieros del Reich a poner en marcha una industria cinema- togrfca capaz de competir con el extranjero. Cuando, por fn, a comienzos de 1917, el ejrcito tena un departamento de imagen y cine (BUFA Bild- und Filmamt) , las pelculas que se producan suscitaron la desesperacin del Alto Mando y la hilaridad en el extranjero: En vez de atacar a los aliados con argumentos convincentes, los alemanes vieron con sorpresa cintas ingenuas, como, por ejemplo Die Entdeckung Deutschlands (El descubrimiento de Alemania), en la que se puede ver como unos marcianos llegan a la tierra y de todos los pases que visitan eligen a Alemania para quedarse, porque es el lugar ms bonito, no sin antes de asombrarse ante las mentiras difundidas por los teletipos de la agencia Reuter en Inglaterra. No es de extraar que, tras la derrota, la acusacin de Hitler de que Alemania haba perdido la guerra no en el campo de batalla, sino en el de la propaganda, encontrase una gran aceptacin, la cual facilitara aos despus la labor de Goebbels. Ingrid Schulze Schneider Los medios de comunicacin en la Gran Guerra Una enfermera alemana niega el agua a un soldado herido 26 Historia y Comunicacin Social Vol. 18 (2013) 15-30 4.4. Campaas de atrocidades Como ya sealamos, la ocupacin de Blgica por las tropas germanas el 3 de agosto de 1914 dara pie a la circula- cin de historias espeluznantes sobre su trato a la poblacin civil indefensa. Los solda- dos eran acusados de violar monjas, quemar catedrales, fusilar prisioneros, descuarti- zar nios, etc. Las denuncias de tales atrocidades circulaban en peridicos, libros y panfetos, apoyadas convenientemente por fotografas trucadas y pel- culas cinematogrfcas. En 1917, el desnimo ante la prolongacin de la guerra, y su conversin en un inmenso frente esttico de trincheras, impuls a los aliados a intensi- fcar los relatos de atrocidades, con el fn de avivar un odio que diera a los soldados las fuerzas necesarias para superar todos los obstculos y salir victo- rioso del trance. La calumnia ms famosa de este tiempo se refere a la supuesta existencia de una fbrica, en la cual los alemanes utilizaban los cadveres de sus soldados con el fn de destilar glicerina para municiones. El Times ingls inici la publicacin de esta noticia con un breve prrafo en s edicin del 16 de abril de 1917. La nota fue recogida por toda la prensa, saltando, tambin, al extranjero. Cada vez se aadan ms detalles macabros, y no faltaban fotografas que parecan atestiguar la realidad de los hechos. Aunque los alemanes desmintieron la informacin, nadie les crey. El efecto propagandstico de esta patraa fue enorme, tambin sobre los soldados germanos. Solamente en 1925 un agente del servicio britnico de espionaje confes, que l haba puesto en circula- cin este rumor (Knightley, 1975:105). Otra escena de atrocidades de fuerte impacto puede contemplarse en la pelcula muda The Heart of Humanity (1918) protagonizada por Erich von Stroheim y Ingrid Schulze Schneider Los medios de comunicacin en la Gran Guerra Llamada a los britnicos a no dar trabajo a alemanes ni a comprar sus productos 27 Historia y Comunicacin Social Vol. 18 (2013) 15-30 Dorothy Phillips: El protagonista acosa a la enfermera de la Cruz Roja que se halla en una habitacin con su hijo. Ante la negativa de ceder a sus deseos y el llanto desconsolado del beb, von Stroheim tira al nio por la ventana. Como seala J. T. lvarez (1986: 88), las falsedades y mentiras propagadas por todos los medios de comunicacin fueron tantas, que al fnal de la guerra un autor francs, Lucien Graux public en un total de ocho volmenes las principales noticias errneas y manipuladas de la guerra. 5. Conclusiones: Consecuencias nefastas para el porvenir La propaganda desmesurada, basada mayormente en informaciones falsas y/o desvirtuadas produjo una ola de protestas en Europa, cuando sus ciudadanos se ente- raron de la verdad. La sensacin de haber sido engaados y burlados por las auto- ridades correspondientes tuvo unas consecuencias opuestas en los pases aliadas y en Alemania. El desengao sufrido por la poblacin britnica y norteamericana tras conocer la manipulacin informativa de la que haban sido objeto durante la Primera Guerra Mundial, infuy notablemente en la decisin de los responsables de esos pases de prescindir de los cuentos de atrocidades en la poca de entreguerras y en la Segunda Guerra Mundial. Por el contrario, Hitler encontr en los abusos periodsti- cos sufridos por Alemania y en sus fallos propagandsticos las pautas segn las cuales desarrollara posteriormente su propaganda letal en el III Reich. En su libro Mi Lucha, Hitler (1984, ed. Espaola: 91-92) critica la propaganda germana con las siguientes palabras: Un error fundamental fue por ejemplo el de mostrar al adversario a la luz del ridculo (sic), forma de propaganda a la que se consagraron con ahnco las revistas humorsticas de Austria y Alemania; y fue errnea esta propaganda porque cuando daba realmente en el blanco serva para que nuestros hombres se formasen una impresin completamente equivocada del enemigo, quien se vengaba acto seguido de terrible manera; porque el soldado alemn bajo la impresin directa de la capaci- dad de resistencia del adversario, comprobaba que haba sido engaado hasta aquel momento por los que manejaban su fuente de informacin; y as en lugar de robus- tecer o, por lo menos, confrmarle en su empeo combativo, se lograba un efecto totalmente contrario. La propaganda de guerra britnica y americana, por el contrario, era psicolgica- mente acertada. Al exhibir ante su propio pueblo al alemn como un brbaro y un huno, preparaban al soldado individual para los horrores de la guerra, contribuyendo a ahorrarle decepciones. El arma ms terrible que pudiese esgrimirse contra l no poda constituir sino una siempre conformacin de los informes que haba recibido, sirviendo para reforzar la fe que le merecan los asertos de su gobierno y para aumen- tar su inquina y su odio contra el villano enemigo. Merced a esto, el soldado britnico nunca tuvo la sensacin de que las informaciones que le llegaban procedentes de su patria fueran inexactas. Cun diferente era la situacin que imperaba en las flas alemanas! Tan as era, que nuestros soldados acabaron por rechazar, por embustero, cuanto papel se las pona en las manos. Ingrid Schulze Schneider Los medios de comunicacin en la Gran Guerra 28 Historia y Comunicacin Social Vol. 18 (2013) 15-30 Slo cabe concluir, que la propaganda en la Primera Guerra Mundial fue nefasta en todos sus aspectos para los pases implicados en ella. 6. Bibliografa ALBES, J. (1996). Worte wie Waffen. Die deutsche Propaganda in Spanien whrend des Ersten Weltkrieges. Essen (Alemania): Klartext Verlag. LVAREZ, J. T. (1983) Elementos para una reinterpretacin histrica del siglo XX: El caso de la informacin propaganda en Gran Bretaa 1914-1918. En Boletn de la Real Academia de la Historia, Tomo CLXXX, Cuaderno I, p. 149-184. (1987). Historia y Modelos de Comunicacin en el siglo XX. El nuevo orden infor- mativo. Barcelona: Ariel. DARRAACOTT, J. (1974). The First World War in Posters. Nueva York: Dover Publications Inc. DEMM, E. (ed.) (1988): Der erste Weltkrieg in der internationalen Karikatur. Hanno- ver (Alemania): Fackeltrger. HEBBEL, F. (1861, reed. 1986). Die Nibelungen. 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Se ha dedicado, especialmente, a investigar el papel que los medios de comunicacin jugaron en las guerras de los siglos XIX y XX, as como las grandes campaas de propaganda de la Reforma Protestante y de la Leyenda Negra contra Espaa en el siglo XVI. Fruto de esta ltima investigacin es su libro (2008): La leyenda negra de Espaa. Propaganda en la guerra de Flandes (1566-1584). Ingrid Schulze Schneider Los medios de comunicacin en la Gran Guerra 30 Historia y Comunicacin Social Vol. 18 (2013) 15-30