LABERINTOS

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POR LABERINTOS

ste es el laberinto,
su entrada mortal sa.
Su centro habita el monstruo.
Con l venturas prueba,
ms mira lo que haces,
que si una vez te enredas,
muriendo no hay librarte,
por ms que te arrepientas.
Tirso de Molina (!"#$%&'(,
El laberinto de Creta, VV 474-481.
INTRODUCCIN.
La propuesta expositiva recorrer emociones, vivencias del pasado y del presente, estrechamente
relacionadas con la percepcin que las personas de diferentes pocas han tenido del mundo en el que vivieron y la
necesidad de vencer los problemas inherentes a la misma existencia.
A lo largo del recorrido no solamente veremos laberintos, si no que en la misma exposicin ofrecemos al
visitante un conjunto de interpretaciones y sugerencias en torno al traado laber!ntico. "l recorrido a travs de la
exposicin es en s! mismo un autntico laberinto involucrndonos de esta manera f!sica y virtualmente.
Aprenderemos pues el concepto de lo que es un laberinto.
#ealiaremos un repaso a lo largo de la historia de la creacin y evolucin de los laberintos, y su
significado tanto arquitectnico, simblico, como l$dico.
%escubriremos las diferencias entre los laberintos unicursales y multicursales.
&ompararemos a la ve, estos con otros posibles laberintos' las redes de comunicacin, el cerebro, el
cuerpo humano, la ciudad, la misma creacin art!stica (pictrica, literaria, musical), etc.
Y por ltimo, y no menos importante, se pretende con esta exposicin qe sea en s! misma na
experiencia art!stica, sa"iendo qe na experiencia art!stica pede resltar siempre peda##ica. Tan slo $ay
qe dis%rtarla.
*
QU ES UN LABERINTO?
Lugar artificiosamente formado por calles, encrucijadas y rodeos dispuestos con tal
artificio que, una vez dentro, sea muy difcil encontrar la salida (&asares).
"sta definicin nos describe un espacio delimitado, cerrado, artificial, tortuoso y complejo
con un recorrido que emprendemos voluntariamente o por una impuesta obligacin , a pesar de
ello sencillamente ser& na rta entre dos pntos.
) *
La esencia del laberinto es el movimiento. "ste ser necesario para entrar, para recorrerlo,
para llegar al centro y encontrar la salida.
"l laberinto como metfora implica todo un abanico de posibilidades simblicas e incluso
f!sicas que proliferan en distintos lugares del mundo y en diferentes pocas'
+,uede haber laberintos naturales-
+Los problemas y decisiones tomadas durante nuestra existencia podr!an formar un
laberinto-

.
EL LABERINTO EN EL CURSO DE LA HISTORIA.
TIPOLOGAS.
A lo largo de la humanidad, desde la prehistoria hasta nuestros d!as, los laberintos han
experimentado variaciones de forma y de tama/o, pero han mantenido su esencia primigenia.
&ircular por laberintos puede ser una experiencia corporal, visual, y tctil, pero tambin
puede suponer un viaje mental e imaginario por el mundo de la magia, la ciencia, la religin y la
moral, el s!mbolo y la esttica.
La distincin entre laberintos nicrsales y mlticrsales es crucial, y establece grandes
diferencias.
'()*RINTO UNICUR+('. ,ese a su aparente complejidad tiene un $nico camino, sin
ninguna encrucijada, calle sin salida o atajo.
"l que lo recorra no tendr posibilidad
de eleccin, ni de error,
%esde su mismo inicio
conducir directamente al centro,
a su coran, y una ve all!
deber regresar
por el mismo lugar que entramos.
0e origina en la Antig1edad.

'()*RINTO ,U'TICUR+('. Aparece en el #enacimiento. 0u entramado es complejo,
pues quien lo recorre se ver obligado a decidir por donde debe de continuar su camino.
&ada ve que llegue a las sucesivas encrucijadas,
tendr el riesgo de perder la ruta
que le conducir al centro
o de no encontrar la salida.
0er imprescindible para salir de l
poseer buena memoria,
o tener el hilo de Ariadna.

2
EL MITO, SU ORIGEN.
Las distintas versiones literarias del mito del laberinto contienen como denominador com$n
algunos elementos narrativos formales fundamentales'
"l laberinto construido por Ddalo, el monstruo o minotauro llamado !sterio o !steri"n,
el hroe #eseo y el hilo mgico de la princesa !riadna.
3odos ellos provienen de una leyenda que en la misma 4recia va a surgir a partir de rituales
muy antiguos y no disponemos de una versin $nica del mito, si no que existen diversas
variantes. ,lutarco cuenta que el rey 5inos, reinaba en la isla de &reta. 0u hijo era un monstruo
con cabea de toro y cuerpo de hombre que caus muchos da/os en la isla, hasta que 6rcules
logr encerrarlo en un laberinto construido por el gran arquitecto %dalo. &omo las guerras eran
frecuentes, los perdedores sol!an pagar tributo a los vencedores y la ciudad de Atenas pag por
largo tiempo al rey 5inos un tributo que consist!a en enviar a la isla a siete jvenes y siete
doncellas para ser devorados por la bestia. "sto ocurr!a cada a/o, hasta que apareci el joven
3eseo que dio muerte al monstruo, con la ayuda de Ariadna, la hija de 5inos. La princesa ayud
al joven a salir del laberinto gracias a un ovillo de hilo y una espada que le entreg.
"ste relato, ha derivado a lo largo del tiempo en un tema de literatura universal,
del que se hablar hasta nuestros d!as.
7
LABERINTO UNICURSAL:
DE LA ANTIGEDAD A LA EDAD MEDIA.
No sa"emos cmo pudo ser aquel laberinto en la isla de &reta, puesto que la $nica imagen
ms cercana a la poca, la encontramos en las caras de las monedas que circulaban por el
5editerrneo entre los siglos 8 y 99 a. &.
"l dibujo era el de un laberinto
cuadrado o circular
y ese tipo ser el que conocamos como
laberinto clsico o de siete circuitos.
8iendo la imagen nos surge una pregunta, pues hay una contradiccin entre la leyenda y la
tradicional representacin grfica.
+0e pod!a perder uno en un laberinto que tuviera un slo recorrido- +,ara qu entonces el
hilo de Ariadna- +:uis para no perder de vista a 3eseo-
"ste tipo de laberinto tambin aparecer en mosaicos romanos procedentes de la geograf!a
que abarc el 9mperio #omano (%esde 9nglaterra hasta ;frica del <orte) con una datacin que va
del siglo 9 al siglo 98 d. &.
"n muchos casos el per!metro del mosaico representa los muros con almenas de una ciudad,
con puertas y torres simtricamente distribuidas. #ecordando por eso mismo el traado de una
ciudad romana, con el cardo y el decumenus que divid!an la ciudad en cuatro cuadrados llevando
al centro de la misma.
=
>currir que a lo lar#o de la anti#-edad Cl&sica y de la *dad ,edia las .ariantes so"re
el di"/o del la"erinto no .an $a cam"iar.
La imagen del laberinto aparece en unos sesenta
manuscritos medievales, a menudo como ilustracin que hace
referencia al mito cretense. Algunas de estas ilustraciones
intentan tridimensionaliar el laberinto, o lo representan como
un cosmos o como la ciudad de ?eric
o ?erusaln.



"l laberinto sigue un dise/o concntrico
circular u octogonal, con @, A, ** o *.
circuitos que conducen invariablemente al centro,
en un recorrido nicrsal.
"n los siglos B99 y B999, el laberinto experimenta un sorprendente cambio de tama/o y de
ubicacin. "n Crancia e 9talia, comenarn a parecer laberintos so"re el pa.imento de i#lesias y
catedrales.
0e podr caminar sobre ellos, desde la entrada al centro, y llevar as! a cabo un ritual de
plegaria, de renacimiento espiritual o de peregrinacin simblica a ?erusaln.
"stos laberintos sern la firma de arquitectos constructores de las catedrales, los nuevos
%dalos.
"l si#ni%icado pa#ano, pasa a
n contexto reli#ioso apropindose as! del mito'
"l laberinto pasa a ser la imagen
del camino del pecado por el que nos gu!a el diabloD
solamente siguiendo a &risto
conseguiremos salir victoriosos de la situacin.
%e esta manera &risto ser el nuevo 3eseo
que consigue derrotar a 0atans, nuevo 5inotauro,
que ocupa el centro del laberinto.

E
6asta el siglo B8 la representacin del laberinto es, pues, unicursal.
<o ser hasta *7.F cuando 0io.anni 1ontana (*2G=H*7==) en su libro
$ellicorum %nstumentorum Liber, represente por primera ve
dos laberintos multicursales, con bifurcaciones y callejones sin salida.
'()*RINTO+ TR(2(DO+ *N TI*RR(
5s all de su simbolismo y funcin, se hallan laberintos horiontales tambin otros en
lugares muy alejados H adems de los pavimentos de las iglesias, o los representados en los
mosaicos romanos . In precedente son los'
Trojaburgen esca!"a#$s.
"staban realiados con piedras y situados al aire libre cerca de la costa, siendo tambin
transitables. Las teor!as sobre su funcin van desde la proteccin y gu!a de navegantes hasta los
rituales de boda. 0e sit$an a partir del siglo B999.
0imilares tambin se encuentran en 9nglaterra, como los'
Turf-cut-mazes.
0ituados en la campi/a, transitables con paredes construidas cavando en la hierba y
quedando ligeramente por debajo del camino. Cueron llevados a las islas en la "dad 5edia, se
dice, inspirados en las grandes catedrales. 0u funcin original es incierta y apunta a rituales
festivos y l$dicos.
@
LABERINTOS MULTICURSALES:
DEL RENACIMIENTO A NUESTROS DAS.
"l laberinto en el #enacimiento seguir ilustrando el camino que conduce de la ignorancia al
conocimiento. "n este sentido los dos tipos de laberinto describen de igual manera este tipo de
recorrido'
"l unicursal suger!a un camino de certidumbre, revestido de autoridad.
"l multicursal supone una participacin activa en la propia educacin. 0imboliar un
mundo con evocacin profana, en el que de nuevo el hombre ser el modelo para la medida de
todas las cosas y el que elegir sobre su destino lejos del teocentrismo medieval.
"l descubrimiento de la perspecti.a, permitir la representacin de laberintos tridimensionales
como este grabado de Jaccio Jaldini
en el siglo B8 y ser frecuente a partir del siglo B89.
Aparecen a la ve los la"erintos .e#etales. Al tener altas paredes no se poseer la visin del
A
conjunto posibilitando la perdida entre sus calles.
&on ellos se unifica la naturalea y el artificio del hombre en su
complicada #eometr!a. 0e convierte as! en un caos ordenado,
en el que la naturalea se encuentra sometida.
A partir del libro de 0io.anni 1ontana,
aparecern numerosos tratados de arquitectura y
dise3os de /ardines.
%esde el siglo B89 y a lo largo de todo el B899 van a
surgir todo tipo de dise/os.
&readores importantes sern 1ilarete, +erlio, T$omas 4ill,
(ndreas )oec5ler entre otros, aportando diversos traados
y formas de representacin. "stos jardines muchas veces
segu!an un complicado programa simblico en l cual el
laberinto era un fragmento.
G
LABERINTOS NATURALES % E&TREMOS
"xplica ?orge Luis Jorges que el rey de Jabilonia encerr a otro rey rabe en un laberinto,
donde vag afrentado y confundido hasta la declinacin de la tarde. A/os despus aquel rey rabe
captur al de Jabilonia y lo amarr encima de un camello para conducirlo al desierto. &abalgaron
durante tres d!as, y le dijo'
&'( rey del tiempo y sustancia y cifra del siglo), en $abilonia me quisiste perder en
un laberinto de bronce con muc(as escaleras, puertas y muros* a(ora el +oderoso (a tenido
a bien que te muestre el mo, donde no (ay escaleras que subir, ni puertas que forzar, ni
fatigosas galeras que recorrer, ni muros que te veden el paso.K
Luego le desat las ligaduras y lo abandon en mitad del desierto, dnde muri de hambre y
de sed.
0i un laberinto es, bsicamente, un camino que une dos puntos del espacio, en este caso se
trata de un laberinto sin l!mites.
"n las matemticas, una red es un conjunto de puntos conectados entre s! por caminos
llamados nudos. Las redes de nudos se observan con mucha frecuencia en la naturalea, ejemplos
son' un rbol, el sistema nervioso o el circulatorio animal, el cerebro... +In ecosistema podr!a ser
un laberinto de red- +L una esfera-...
"l rbol y la esfera son dos hermosos s!mbolos
y a la ve metforas, en la frontera de los
laberintos posibles, porque resulta que las
formas ms frecuentes de la naturalea son
o bien el fractal, o bien
derivadas de la simetr!a circular.
*F
La esfera es el m,imo laberinto, y la forma ms frecuente de la naturaleza pues no hay
nada que desoriente ms que una esfera circular, pero de esta forma tambin surgen otras
derivadas como la ovalada, la espiral, los pol!gonos, etc. La -nica familia de formas que no se
podra reducir a la simetra circular seran las formas fractales, como los rboles, las nubes...
"ntonces, se puede decir que las dos formas ms frecuentes en la realidad viva e inerte, son
dos familias extremas de laberintos' las esferas y los fractales.
**
Resumiendo, estamos siempre en un laberinto,
vivimos en un laberinto
y crecemos en un laberinto. Larga vida al laberinto!
PROPUESTA DE ACTI'IDADES PARA REALI(AR EN CLASE
A continuacin os ofrecemos una serie de ejercicios relacionados en cierta forma con el
tema expuesto. &ada ejercicio propuesto se podr vincular a una asignatura o rea, seg$n
convenga al docente, con lo que fcilmente se podr motivar al alumno para antes, o despus de
la visita a la exposicin, sin necesidad de crear deliberadamente un tiempo aparte y exclusivo.
.!#/.0#%1!23 L!$/4%5#'2 D/ /2+/6'2.
"l dibujo de Leonardo da 8inci de una habitacin octogonal de espejos que multiplica hasta
el infinito la imagen de un hombre colocado en el centro es el origen de un dispositivo que se
har!a popular cuatro siglos despus con los laberintos de espejos que se emplaan en
&onstantinopla, ,raga, y Lucerna, y la posterior proliferacin en parques de atracciones en todo el
mundo.
,ateriales' %os espejos, de un tama/o no superior a una cuartilla. Colio y lpi.
Aprenderemos como a partir de un segmento, la simetr!a y la multiplicacin de imgenes
surgen todas las infinitas formas poligonales. 3raaremos un punto en el folio y delante de
l un segmento. 0obre el punto colocaremos los espejos cuyos extremos se unirn a los
bordes de la l!nea traada. %ependiendo del ngulo de los espejos tendrn que ir
descubriendo las figuras que surgen' 3ringulo, cuadrado, pentgono, hexgono, etc. 6asta
llegar a la circunferencia.
L/578!3 85 4/1'44%D' +'4 L'2 #/9#'2
&uento de 3eseo y el 5inotauro.
&uento de Mcaro y %dalo.
6istoria de la bella #osamunda.
*.
1'5'1%.%/5#' D/L ./D%'3 L!$/4%5#'2 5!#84!L/2.
#ecordando los mosaicos romanos y manuscritos de la "dad 5edia en los que los
laberintos se comparaban con ciudades, a continuacin proponemos que la misma ciudad se
compare con algunas partes del cuerpo humano, as! como sus desechos'
*. 8asos sangu!neos' arterias y venas. A. 8!as p$blicas
.. ,ulmones. J. ,arques y jardines...
2. &oran &. ...
7. "stmago. %. ... .
=. &erebro. ". ...
E. #i/ones. C. ...
@. 6!gado. 4. ...
A. "xcrementos. 6. ...
G. Jacterias. 9. ...
#ecordando el cuento de los dos reyes de ?. L. Jorges, invitemos a los ni/os a pensar en
laberintos naturales. +%e qu estn compuestos- +:ue nos podr!a suceder, en caso de vernos
perdidos en ellos- "jemplo'
*. %esierto N arena, cielo, sol, calor, fr!o, sed, miedo, hambre, etc...
.. 5ar N agua, cielo, sol, temperatura...
2. Josque N rboles...
D%$86'3 /L L!$/4%5#' D/L !4#/
&omo hemos visto un laberinto es la obra de un creador, bien un arquitecto, escritor,
escultor, pintor, grabador... 0abiendo que la exposicin contar con abundantes obras de estos, lo
que proponemos son dos ejercicios en los cuales la observacin y la creatividad se alternarn. "n
ambos casos aprenderemos a ver, que no a mirar.
,ateriales' folios, lpi, lpices de color y goma.
"?"#&9&9> %" 95A49<A&9O<' 0obre un folio en blanco los alumnos comenarn a
traar l!neas rectas y curvas en todas las direcciones, pero sin levantar el lpi del papel. <o
pararn hasta que el folio est completamente lleno. Al terminar, con un lpi de color intentarn
ir entresacando de toda esa mara/a de l!neas, formas posibles de animales y colas.
"?"#&9&9> %" >J0"#8A&9O<' &olocarn la lmina del revs, sobre su mesa. "st
tendr que estar previamente tapada, con otro folio, para que los ni/os no sepan lo que estn
dibujando. P<o vale destapar para verQ A continuacin se destapar muy lentamente la parte
superior, bajando un poco el folio que hay encima. &omenarn a dibujar de iquierda a derecha,
reproduciendo cada una de las l!neas que aparece. 3endrn que acertar en calcular los espacios y
las inclinaciones. Los profesores tendrn que ayudarles a observar si lo dibujado es lo correcto.
&uando hayan terminado la l!nea, volvern a bajar lentamente el folio dejando otra l!nea al
*2
descubierto, as! hasta la finaliacin del ejercicio. P0i no se pierden, no saldr del todo
desproporcionadaQ
D4!.!#%:!1%;5
,roponemos la %#A5A39RA&9O< del siguiente poema de Antonio 5achado. 0e realiar
a partir de c!rculos concntricos que irn girando simultneamente a partir de lo recitado.
La plaza tiene una torre, SSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS &!rculo de ni/os conforman la
plaa.
,aso al frente de ni/osHtorre, crean
un c!rculo interior.

la torre tiene un balc"n, SSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS <uevo c!rculo concntrico.
el balc"n tiene una dama SSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS Aparece una ni/a en el centro.
la dama una blanca flor. SSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS La ni/a saca una flor.
<a pasado un caballero*
=>uin sabe por qu pas" Los ni/osHtorre y los ni/osH plaa dan
vueltas inversas.
? se (a llevado la plaza, SSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS A partir de aqu! se irn derrumbando
lentamente a medida que se vaya
recitando el final.
con su torre y su balc"n,
con su balc"n y su dama,
su dama y su blanca flor.
9nsistir en la identidad de ese misterioso caballero, que no es otro si no el tiempo.
*7
BIBLIOGRA)A RECOMENDADA
+spelt, ,amon y Tusquets, -scar (.//(. Por Laberintos. Catlo0o. *arcelona.
+spelt, ,amon (.//'(. Laberints. Llocs, textos, imatges, films. *arcelona1 2aplan.
Santarcan0eli, 3aolo y +co, 4mberto (.//.(. El libro de los laberintos. Madrid1
+diciones Siruela. S.).
5raves, ,obert (#''(. Mitos griegos. Madrid1 )lianza +ditorial.
3ommau6, 7van. Teseo. *arcelona1 Corimbo. (-rientaci8n de lectura1 ) partir de
# a9os(.
:a;thorne <athaniel (###(. Centos de Tangle!ood. *arcelona1 )lba +ditorial.
S.=.
(-rientaci8n a la lectura a partir de # a9os(.
3>5?<)S @+* ,+C-M+<A)A)S

Bersi8n on line del libro de los laberintos en1. http'TTbooUs.google.esTbooUs
p0ina visitada por Cltima vez el D de enero de ./.
30ina dedicada a tipos de laberintos en1
http'TTVVV.ehu.esTfrancoiradiTLA J"#9<3>0TlabeSF*.htm
30ina dedicada a crear laberintos1
"tt#$%%#&&lema'er.disco(er)edcation.com%*d(Ma&e+et#,orm.as#
*=

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