El Diablo
El Diablo
El Diablo
a este ser con el Satn hebreo del Libro de Job (1:6-8), con el Diablo del Evangelio de Mateo (4:8-10), con la serpiente del Gnesis (3:1-5) y con el gran dragn del Apocalipsis (12:9), todos como un solo personaje. Algunas corrientes de brujera moderna consideran que la figura del Diablo se ha tomado de la figura del Dios pagano de los brujos, asimilada a Satn en los primeros siglos del cristianismo. Pero son rigurosos al establecer que no existe ninguna relacin fuera de la etimolgica entre su Diablo tambin llamado Divell y el Diablo cristiano. Gerald Gardner, el fundador de la Wicca, hace mencin de este Divell convertido en Diablo en su libro Witchcraft today (1951), como una forma mitolgica del antiguo dios europeo de la Naturaleza.[cita requerida] Etimologa posible Para referirse a este ser sobrenatural, la Biblia hebrea utiliza el trmino satn (adversario) para referirse al acusador de los hombres ante Dios y aquel que incita al mal. Con esta acepcin aparece, por ejemplo, en Job 1:8-12. En el siglo III, con la redaccin de la Biblia de los Setenta, los traductores griegos del Antiguo Testamento, sustituyeron el hebreo Satn por el griego Dibolos (), que signifca acusador o calumniador, sustantivo que proviene del verbo diaballein (calumniar, difamar) y este a su vez de las races da (a travs) y ballein (arrojar).1 Otras versiones [cita requerida] plantean que las palabras diablo, devil, djofull, divell, con todas sus variantes, no tienen por qu haber derivado de dibolos, aunque el uso de esta variante podra deberse a un juego de palabras similar al que convirti al dios cananeo Baal Zebl (literalmente el seor prncipe) en Baal Zabub (el seor de las moscas), el actual demonio Belceb. Esta versin plantea que la palabra diablo derivara del idioma protoindoeuropeo *deiwos, adjetivo que significa celestial o resplandeciente, una derivacin preindoeuropea de la raz *diw (resplandecer), relativa sobre todo al cielo diurno. Otra posibilidad ms remota es la raz *diiv (jugar). La raz *deiwos gener no solo la palabra divel o teufel en lenguas de Europa del Norte, que son equivalentes al diablo de este idioma; tambin derivan de
ella el griego theos, el snscrito deva, el lituano dievas, el germano tiwaz, el latn antiguo deivos y el latn moderno deus. De esta misma raz proviene la palabra espaola Dios. La palabra en castellano La primera vez que aparece documentada la palabra diabolo en castellano es en las Glosas emilianenses del siglo X en una glosa marginal que dice: "Elo tercero diabolo". En los siglos siguientes de la Edad Media diabolo/diablo tiene un uso ms extendido que su sinnimo demonio, aunque lo usa Gonzalo de Berceo con el significado de geniecillo o espritu travieso y divinidad inferior. Precisamente es Berceo quien relata a principios del siglo XIII la leyenda griega de Tefilo en forma de clrigo judo que para alcanzar un mayor grado eclesistico hace un pacto con Satn que recibe los calificativos de "falso ngel", "sutil adversario", "mortal enemigo", "cativa bestia" y "maestro savidor" aunque interviene la Virgen Mara que se apodera del papel que Tefilo haba firmado. Referencias al diabolo/diablo aparecen en el Libro de Apolonio, en el Libro de buen amor del arcipreste de Hita que tambin recoge la leyenda de Tefilo y en el Conde Lucanor del infante don Juan Manuel.2 En la Biblia
La cada del diablo segn Gustave Dor. En el Nuevo Testamento se explica el origen del Diablo como uno de los ngeles de Yahv que se hizo malvado (Juan 8:44). Se infiere que es una criatura espiritual de la familia Anglica de Yahv Dios (Job 1:6). Segn manuscritos antiguos (como la Biblia Vulgata Latina de San Jernimo), el nombre real de l en el cielo era Lucifer y se le cambi el nombre a Satn (adversario) por estar en contra de Dios, a causa del deseo por la adoracin que todas las criaturas inteligentes rendan al Creador (Mateo 4:9).
Segn la Biblia El texto de Isaas (Is. 14:12-15) parece referirse a esta historia. El ltimo versculo de este texto muestra que este relato se aplica a un hombre (proverbios contra el Rey de Babilonia), aunque indirectamente est dirigido a Satans (ver Isaas 14:4). El relato habla de su ambicin por llegar ms all de las estrellas de Dios, en la Biblia se suele referir como estrellas a los reyes de Israel (y posteriormente de Jerusaln) del linaje de David descendiente de Jacob (Nmeros 24:17). Otro texto habla sobre este tema, y se encuentra en Ezequiel 28:12-19, en donde se profesa una advertencia sobre el rey de Tiro; que describe muy bien el origen del Diablo o "Lucifer" (portador de la luz). Tambin habla que en un momento determinado de la historia, "para siempre dejar de ser", dando a entender la victoria de Dios sobre el Diablo; que tiene su punto fundamental en la crucifixin de Jess y tendr su culminacin en el "da de Yahv", es decir, en la Segunda venida de Cristo (Jeremas 51:44; Hageo 2:6,7).3 Un tercer mensaje con caractersticas similares encontramos en Ezequiel 31:118. All se dirige un mensaje para el rey de Egipto (nuevamente con un mensaje doble: para el monarca humano y al mismo tiempo para Satans).4 Amalgamados por la soberbia Puede apreciarse que en un mismo mensaje tiene doble destinatario: va dirigido a Satans pero tambin a un engredo rey humanoide. Para llegar a la comprensin de ese tipo de textos es importante tener en cuenta que en nuestro mbito humano pueden darse dos casos completamente opuestos:
El Demonio en la Catedral de Vitoria. Por un lado, encontramos que el hombre fiel tiene a Dios en su interior y pasa a estar guiado por el Espritu de Dios (Romanos 8:14; Glatas 2:20). Quien ejercita la justicia es justo [] y es de Dios (1. Juan 3:2,7). Pero, por otro lado, el diablo siempre intenta apoderarse de la conciencia de las personas:
Velad, porque vuestro adversario el diablo, [...] anda alrededor buscando a quin devorar. 1. Pedro 5:8 No sea que llevado de la soberbia venga a caer en la misma condenacin en que cay el diablo. 1. Timoteo 3:6 Asimismo, Satans (el ngel cado) parece actuar principalmente sobre las conciencias de aquellas que tienen ms poder (1. Samuel 19:9; 1. Crnicas, 21:1,7), y en muchos casos consigue perdurar ya que: [...] hay en medio de ellos un espritu de corrupcin, no conocen al Seor Oseas 5:4 {{Desde su cada, el diablo contina pecando [a travs de los hombres que se dejan influenciar por l].|1. Juan 3:8}} Quien comete pecado, del diablo es. 1 Juan 3:8 Precisamente cuando el diablo consigue ser el gua de una persona, esta har su voluntad y de esa manera, ambos pasan a actuar como una unidad (Juan 6:70). Esa unidad era a la que se refera el profeta cuando expresaba: Seor! [...] T, al azotar al soberbio heriste al dragn. Isaas 51:9; Jeremas 50:31 La soberbia es lo que se recrimina con mayor nfasis a los lderes terrenales amalgamados con el demonio [tal como lo era el rey de Tiro, tambin el faran de Egipto (Ez 32:2), o el rey de Babilonia (Jer 51:34), etc que son casos en los que Dios se dirige a ellos utilizando la palabra hebrea #8577 tanniyn -traducida como dragn o monstruo-]. [Se puede agregar que tanto en Ezequiel 28:17 como en 31:10 se usa la palabra hebrea gabahh,5 que se traduce como soberbia. Por eso, las palabras dirigidas al rey de Tiro (o al faran, o al rey de Babilo nia) estn al mismo tiempo dirigidas a Satans. Sus nombres y representaciones Los nombres ms comunes o conocidos con que se nombra al diablo en la Biblia son: Lucifer, Satans, Belial, Samael,[cita requerida], antigua serpiente, gran dragn, Jaldabaoth, el dios negro, el dios de este siglo y el padre de la mentira.
Es quien crea y dirige a la Bestia (estructura de poder imperial). El nmero del diablo, considerado la Marca de la Bestia, es el seiscientos sesenta y seis (666). El diablo en diferentes religiones Judasmo En el judasmo no hay un concepto claro acerca de la personificacin de este personaje a diferencia de religiones como el cristianismo o el islamismo. En hebreo, la palabra bblica ha-Satn significa el adversario o el obstculo, o tambin el perseguidor (reconociendo que el dios Yahvh es visto como el juez ltimo). En el Libro de Job, ha-Satan no es un nombre propio sino el ttulo de un ngel gobernado por el dios Yahv; l es el jefe perseguidor de la corte divina. En el judasmo, ha-Satan no hace mal, le indica a Dios las malas inclinaciones y acciones de la humanidad. En esencia, ha-Satn no tiene poder hasta que los humanos no hagan cosas malas. Despus de que Dios seala la piedad de Job, ha-Satn le pide autorizacin para probar la piedad de Job. El hombre justo es afligido con la prdida de su familia, propiedades, y ms tarde, de su salud, mas l sigue siendo fiel a Dios. Como conclusin de este libro, Dios aparece como un torbellino, explicndoles a los presentes que la justicia divina es inescrutable. En el eplogo, las posesiones de Job son restauradas y l obtiene una segunda familia para "reemplazar" a la primera, que muri. En la Tor, este perseguidor es mencionado varias veces. Un momento importante se presenta en el incidente del becerro de oro. El perseguidor es el responsable por la inclinacin al mal (yetser harah), de todos los hombres. En la Tor, l es el responsable de que los hebreos construyeran el dolo (becerro de oro) mientras Moiss estaba en la cima del monte Sina recibiendo la Tor de parte de Dios. En el Libro de las Crnicas, el perseguidor incita a David a hacer un censo ilegtimo. De hecho, los libros de Isaas, Job, Eclesiasts y Deuteronomio tienen pasajes en los que el dios Yahv es mostrado como el creador del bien y del mal en este mundo.[cita requeri