Animacion A La Lectura
Animacion A La Lectura
Animacion A La Lectura
La lectura puede entenderse desde varios puntos de vista teóricos, es decir, como
una actividad visual, como una tarea de comprensión de comprensión de
transcripción del lenguaje oral, como un proceso de reflexión, y de otros muchos
modos.
Una vez visto el concepto de lectura podemos decir, que uno de los objetivos
prioritarios en la enseñanza del lenguaje es la fijación de hábitos lectores en los
niños.
Hay que conseguir que el niño descubra el libro y disfrute con la lectura; que la
lectura sea para él "ocio", no trabajo aburrido.
El educador no debe olvidar que la lectura será siempre comprensiva, desde los
primeros niveles, condición indispensable para que al niño le guste leer: no gusta lo
que no se comprende.
Si el niño siente el placer de la lectura, leerá muchos libros. Este hecho traerá
implícita la consecución de una serie importante de objetivos:
Creo que todas estas razones son suficientes para ver la importancia de la lectura
en los niños y el porque de la importancia de animarlos a leer.
En cualquier diccionario podemos hallar una acepción de ese verbo. Pero a los
efectos de nuestros intereses, recordemos esta definición que resume el sentido de
esa acción humana: Leer es interpretar la palabra escrita y construir su significado.
Para terminar estas definiciones, podemos decir que formar hábitos de lectura es
lograr que el individuo recurra regularmente, y por su propia voluntad, a los
materiales de lectura como medio eficaz para satisfacer sus demandas cognitivas y
de esparcimiento.
Estos conceptos nos ayudarán a que podamos llegar a conseguir nuestro propósito,
que no es otro que el de lograr un niño lector, de manera que le enseñemos lo
mejor posible a desarrollar su capacidad de comprensión y al mismo tiempo
fomentar el gusto por la lectura.
Hoy día podemos leer casi a diario en todos los periódicos y revistas artículos como
estos: "La mitad de los españoles no lee casi nunca", "La afición por la lectura no
sólo no crece sino que decrece", "Los niños pasan más horas con las videoconsola
que con los libros", etc..
Cuando nos encontramos con artículos como estos, o nos llegan noticias de lo poco
que hoy día se lee, o nos enteramos comentando con nuestros amigos y familiares,
o incluso lo vemos nosotros mismos en nuestras casas, (el tiempo que pasan mis
hermanos pequeños viendo la televisión, !es increíble !), debemos de empezar a
preocuparnos y de darle al problema la importancia que tiene, que es mucha,
quizás algún día consigamos que no se tengan que escribir artículos como los
anteriores.
Por esta razón podemos decir que es tan valioso el desarrollo de la lectura
comprensiva en los primeros niveles de Primaria. Porque de esta forma el niño se
habitúa, según se redacta en el Currículo, a comprender el sentido global de un
texto y a localizar alguna información específica, además de leer por placer se
habitúa a sentir la emoción de la lectura de un cuento, un cómic o una poesía.
Sobre esto ALLER, C 1998 nos dice que: "El niño que no comprenda lo que lea, no
sentirá gusto por la lectura. En cambio, el niño al que fascine leer porque
comprende lo que dice, leerá muchos libros y ello lleva consigo la consecución de
numerosos objetivos".
Estos objetivos serán comunes para todas las estrategias lectoras que se
propondrán en el apartado de Juegos y Actividades
Los puntos que aquí expongo han sido elaborados a partir de la consulta de varios
documentos.
Podemos considerar éste como el objetivo primordial, puesto que, como ya hemos
señalado, es necesario que el niño disfrute mientras lee, que sienta que es
divertido; como un juego.
La evidencia nos demuestra que cuanto más se lee más información obtenemos de
un determinado tema y así conseguiremos que los niños estén mejor preparados.
*Dominar el vocabulario.
Relacionado éste con el primer objetivo, hay que considerar fundamental desarrollar
en el niño la capacidad de creatividad ( más adelante trataré este tema un poco
más ampliado).
Es un hecho comprobado, aquel niño que lee de forma habitual, comete menos
faltas de ortografía que el niño lector. Esto se debe a que según se va leyendo la
vista "fotografía" las palabras.
*Aprender a estudiar.
No hay ninguna duda que un niño que lee correctamente capta mucho mejor lo que
está estudiando que otro niño que lee con dificultad.
El niño al leer descubre lo positivo que puede llegar a ser el lenguaje y la cantidad
de posibilidades de expresión que en el encontramos.
Con todas estas aportaciones citadas, el niño habrá conseguido dominar la lectura y
con ello comprender lo que lee. De esta forma será más fácil entender la
importancia que tiene ser un buen lector para su vida académica, profesional y
personal.
ANIMACIÓN A LA LECTURA.
La pregunta que nos hacemos ahora es: ¿Cómo hacer que el niño disfrute con la
lectura ?.
La esencia del ejercicio para la animación a la lectura es conseguir que el niño está
motivado, de manera que, como se ha venido diciendo a lo largo de este trabajo,
que leer para él se convierta en un acontecimiento divertido, entretenido, solaz, un
juego en el que él se siente feliz y seguro.
Por otro lado, cabe destacar que es fundamental hacer más hincapié en los
primeros años de escolaridad del niño, porque el proceso de la lectura se hace más
fácil en esas edades. Ya que el niño dispone de menos esquemas mentales, es decir
son más rudimentarios y no se tienen consolidados todavía las estrategias
cognitivas.
Este esfuerzo es esencial, puesto que si el niño supera con éxito este "escalón"
empieza a entender lo que lee y conseguirá en los años siguientes de su vida gozar
verdaderamente de la lectura, por que un libro llama a otro libro.
En los primeros años de Educación Primaria es donde cobran más protagonismo las
estrategias lectoras y los juegos que animan a leer. Se hace, pues, necesario
mostrar al niño el libro mediante juegos, actividades lúdicas y didácticas a la vez,
programadas en la escuela para que ayuden a potenciar futuros lectores.
Nos debemos plantear otra pregunta importante: ¿Hay que obligar a leer?. Después
de una larga reflexión ciertos autores han llegado a la conclusión de que no es
conveniente imponerse para obligar a los alumnos a leer, puesto que el verbo leer
no se puede conjugar en imperativo. Se ha demostrado que ha la larga es más
efectivo realizar actividades que motiven a la lectura voluntaria de los discentes.
"En la tarea de acercar a los más jóvenes a la lectura, los padres no se encuentran
solos. En esa batalla pueden hallar el apoyo de importantes aliados, como los
maestros y los bibliotecarios. Cada quién en su terreno y con las armas propias de
su condición, puede hacer mucho. Lo ideal es que esos tres factores (hogar,
escuela, biblioteca), conjuguen sus empeños".
Yolanda Reyes3 nos dice: "donde quiera que haya un niño sentado en las rodillas de
su mamá siguiendo, con los ojos muy abiertos, las peripecias de un héroe de papel,
existe una promesa de lectura. Y cuando a cada maestro, en su aula de clase, se le
empañe la mirada o se le quiebre la voz compartiendo con sus alumnos un poema
que los hace sentir como en su propia casa, empezarán a sobrar todas estas
palabras que se escriben sobre el fomento y la promoción de la lectura", porque ya
se estará dando todo lo que nosotros perseguimos, simplemente no habrá
cronómetros ni estadísticas ni patrones metodológicos que puedan medir sus
avances.
Ellos nos proponen un truco muy simple, por llamarlo así, que consiste en que en
casa se ponga al alcance de los niños libros, resistentes si aún son pequeños, de
colores llamativos, de cartón o plástico y que ellos puedan palpar y manipular para
que sientan ganas de abrirlos y de ojearlos. Así de esta forma habrá muchas
posibilidades de que el niño escoja alguno de los libros y definitivamente lo lea.
Recomendaciones.
Selección de libros.
Para despertar en los niños una actitud curiosa, activa y creativa hacia la lectura se
considera fundamental la motivación. Pero otro aspecto también importante es la
selección de libros de lectura. ALLER, C. nos dice:
El niño lector debe ser libre a la hora de elegir sus libros de lectura. Pero en cierto
modo, si conocemos, aunque sólo sea a grandes rasgos la personalidad del niño,
podemos sugerirle de alguna manera la lectura de unos libros determinados,
teniendo presente que no debemos obligarles jamás a leer lo que no deseen.
"Es importante, por ejemplo, saber qué tipo de obras suelen preferir los muchachos
en los distintos estadios de su maduración intelectual y psicológica. Si bien es cierto
que siempre existen diferencias dentro de las irregularidades de cada edad, esos
intereses pueden ser una valiosa pista para llegar a nuestro objetivo".
Este autor nos propone para cada etapa, en la vidas del niño, unos modelos de
lectura que van cambiando según las edades y los gustos de cada cual. Este punto
resulta fundamental tenerlo en cuenta a la hora de motivar al menor hacia la
lectura.
Algunos ejemplos de estos cuentas para esta edad serían algunos de los recopilados
de internet, todos ellos sacados de los Tesoros del Arcoiris, (ver anexo I).
Para los niños del primer ciclo tenemos las rimas que posean musicalidad y ritmo
así como las historias de repeticiones. A mi parecer son recomendables para la
edad de seis o siete años (siempre sin generalizar) todos los cuentos sencillos que
contengan ternura y un toque de magia, como son, por ejemplo la colección de
Cuentos Clásicos Infantiles: Pinocho, Blancanieves, Caperucita Roja, Hansel y
Gretel, Cenicienta, El Patito Feo, El Libro de la Selva, Bambi, Alicia en el País de las
Maravillas (...). Aunque he de reconocer que estos títulos resultan muy atractivas
en todas las edades. Otros de los ejemplos los podemos consultar en el Anexo I (El
gato de los bigotes mágicos).
Cuando el niño cuenta ya con ocho o diez años de edad se le considera un lector
autónomo. Para él se recomiendan lecturas ágiles, que no muestren extensas
descripciones. La fantasía suele atraerles bastante. es muy probable que disfruten
con las leyendas y los mitos, como por ejemplo "el libro de Monstruos, Dioses y
Hombres". En el anexo I podemos encontrar el cuento "El libro sin polvo".
Los niños van creciendo y como mencionamos anteriormente sus gustos van
cambiando. A partir de los once años es probable que el niño tenga preferencia por
los libros de carácter más realista: aventuras y desventuras de piratas, caballeros
andantes, cosmonautas, etc.. Unos libros interesantes para los niños de doce o
trece años son: "La isla del Tesoro", "Las aventuras de Tom Sawyer" etc.. No
obstante en esta edad no podemos olvidar que ya les empiezan a interesar las
historias de amor.
Resumiendo, se pude comprobar el hecho de que hoy día, la mayoría de las obras
editadas para el público infantil y juvenil, llevan escritos en sus contraportadas las
edades para las que se recomienda el libro. Sin embargo debemos tener en cuenta
que los niños tienen la última palabra sobre sus gustos.
CREATIVIDAD O FANTASÍA.
A todos nos ha sucedido que alguien nos explica o revela algo y "se nos abren los
ojos", vemos cosas que antes nos pasaban inadvertidas aunque siempre habían
estado. Es muy común que alguien no perciba que está viviendo en algo malo,
porque dentro de su panorama no hay nada que pueda comparar como mejor. Esto
se debe a que lo que deseamos, lo que percibimos y lo que somos capaces de
imaginar están íntimamente entrelazados.
La imaginación, la lucidez, la capacidad creativa, son herramientas que permiten un
cierto grado de maniobra, cierta independencia, frente a un devenir mecánico de la
existencia.
El mundo imaginario.
En este mundo imaginario están dibujadas todas las cosas que creemos que se
pueden hacer y las que no. Ahí están los límites de que tenemos por posible e
imposible. Este mundo no es algo que se piensa a cada rato, por supuesto, ni
siquiera se es consciente de él; pero es el aliento que está en cada gesto. Su
presencia decide hasta lo más cotidiano: comprarse o no comprarse algo, gastar o
ahorrar, atreverse a conquistar alguien que nos gusta o no, elegir una carrera u
otra, aspirar a otro trabajo, etc.
Esto también se manifiesta en las grandes empresas; porque las comunidades, las
naciones, también poseen un imaginario, llamémosle colectivo, y todo el mundo
responde a él.
Ahora bien cuando un niño mete las manos en la arcilla las hunde en su
imaginación y, en verdad, es su mundo interior el que se amasa entre sus dedos.
En cada dibujo, cada cuento, cada poesía la mente crece, gana en plasticidad para
relacionar datos o concebir nuevas ideas, se modela.
Ser más creativo no es importante porque se puede producir más y mejor, sino
porque forma parte del derecho a plenitud que tiene toda persona; y el deber de
toda comunidad, o estado, respecto de sus ciudadanos de brindar las condiciones
que faciliten ese desarrollo y evitar todo lo que lo perturbe. La capacidad
imaginativa forma parte indisoluble del derecho a trazarse horizontes dignos para la
propia vidas.
Para que los niños se decidan a leer, debemos abordarlos desde distintas fuentes.
Así que habrá que animar al niño a leer desde varios frentes: desde la lectura,
desde la escritura, desde la oralidad y desde otras formas de expresión. Voy a
exponerlas todas ya que nos pueden ser útil ya que nuestras actividades para la
animación a la lectura no es solo leer.
El niño debe contar con una oferta variada de libros y no descuidar los libros de tipo
informativo.
Hay que darles libertad para elegir sus lecturas y distintos tiempos para leer, en
función de sus capacidades e intereses.
Diseñar programas de animación lectora para cada curso con objetivos, actividades
y recursos.
Para que el niño lea es muy beneficioso ayudarle a producir sus propios textos.
Tener en cuenta todos los tipos de escrituras que se pueden producir y trabajarlas
en las aulas: Personal (diarios, cuadernos de viaje, recuerdos, agendas..),
Funcional (cartas, contratos, resúmenes, solicitudes, invitaciones, felicitaciones,
facturas..), Creativa (poemas, cuentos, anécdotas, gags, novelas, ensayos,
canciones, chistes...), Expositiva (informes, exámenes, periodismo, literatura
científica, noticias, entrevistas, instrucciones...), Persuasiva (panfletos, opinión,
publicidad, anuncios, eslóganes...), etc.
"En relación con la preparación dela lectura, es muy importante que se cumpla una
doble función: la de motivar y estimular al niño para la lectura del texto, y la de
acercar y aclarar todos aquellos aspectos que puedan ofrecer dificultades para su
comprensión".
Descripción del juego: Los niños deben imitar, a través de una simple
escenificación, acciones referidas a personajes de los cuentos o lecturas, que
previamente han leído en clase, comenzando siempre con el "Yo, Yo...Soy.."
Participantes y director: Puede participar todas la clase, pero sin alargarlo para que
no se haga pesado. El animador prepara con antelación dos tipos de fichas, unas
con personajes del cuento y otras con preguntas que sugieran las acciones de los
mismos.
Material y tiempo: Libros de lectura, fichas fabricadas por nosotros con dibujos y
frases, dos cajas sorpresas. Emplearemos diez minutos en la motivación y en el
resto de la estrategia treinta minutos.
Metodología: Para motivar a los niños el profesor realiza unas acciones que sean
graciosas y ellos deben imitarlas. La metodología de juego puede varias en función
de la edad que tengan los jugadores, pero la dinámica es la misma: el niño coge
una ficha de cada caja, en una pone por ejemplo "Yo soy un mono" y en la otra "
"¿Cómo ando yo ?" o "¿Donde vivo yo ?", así, mientras que los niños van
contestando a las preguntas simula las acciones correspondientes al personaje que
le ha tocado.
Esta actividad me parece muy interesante porque a los niños les encanta imitar y
de esta forma tan divertida les motivamos a leer ya que partimos siempre de la
lectura de un cuento, una fábula, una poesía. Esta actividad se puede acompañar
de música relativa a los cuentos a tratar lo cual, encanta a los niños y les ayuda a
escenificar y a moverse.
"¡Adivina Adivinanza...!
-"Una señorita muy señoreada
siempre va en coche
y siempre va mojada". (la lengua).
-"Ahora escuchad con atención, porque en la historia que os voy a contar, muchas
cosas tendréis que averiguar".
Entonces el director del juego les narra un cuento, después, y de la forma más
divertida posible, les presenta oralmente algunas adivinanzas relacionadas con
esta.. Si fuera necesario se ayudará a los niños para que den respuestas válidas y
no decaigan en el interés. En cualquier momento los niños individual o
colectivamente pueden sugerir alguna adivinanza que se les ocurra.
Una vez averiguadas todas las adivinanzas pueden efectuar acciones mímicas en
relación con el texto de la misma. Se puede completar la estrategia realizando
algún dibujo alusivo al tema.
Esta estrategia puede resultar muy divertida y dinámica. Es una forma de que los
niños se animen a participar activamente en clase. Las adivinanzas deben estar
relacionadas con el cuento leído, o que se vaya a leer ya que así motivaremos a los
niños a acercarse a la lectura.
Respecto a los criterios de evaluación: Captar el sentido de los textos orales que se
exponen en el aula, para comprobar que el niño potencia su capacidad de
comprensión de los mismos y de las adivinanzas con las que trabajamos.
Que los niños participen en las actividades escolares, cumpliendo unas normas
básicas de convivencia (respeto, cooperación...).
También se puede evaluar la forma que tienen los alumnos de elaborar textos
escritos (Adivinanzas), y asegurarse de que no tienen dudas ortográficas
sugiriéndoles que usen el diccionario o los libros con los que trabajamos..
JUEGO Nº3: "El juego de los trabalenguas".
Otro apartado del juego sería que los niños leyeran individual y silenciosamente el
trabalenguas y luego lo recitaran en alto, si fuera posible de memoria.
Esta actividad creo personalmente que es muy útil para dominar las dificultades de
articulación que un niño puede tener, también mejora la entonación y la
acentuación de las palabras y las frases.
PROPUESTA LÚDICA
PRESENTACIÓN:
Para hacer esta práctica me he inspirado en todos los trabajos y actividades que he
consultado a lo largo de estos meses para la realización de este proyecto.
DESCRIPCIÓN:
Esta estrategia consiste en utilizar una caja de cartón, con dos compartimentos,
debidamente adornada y decorada para llamar la atención de los niños. En una de
ellas estarán las fichas con ilustraciones infantiles o con acciones a realizar, y en los
otros cuentos que pueden elaborar los propios niños o el maestro los puede aportar
de la biblioteca o de otro lugar o elaborar el mismo.
En las fichas podemos incluir lo siguiente: (Todo deberán hacerlo después de haber
escuchado al profesor y por escrito).
- En las que haya un personaje dibujado, tendrán que contar una historia corta
sobre ese personaje.
Se pueden incluir todas las fichas que el animador crea necesario o el mismo
invente (caven infinidad de fichas).
Después de escuchar la historia daremos un tiempo a los niños para que realicen la
actividad que le ha salido en la ficha, a continuación empezará el profesor ya que él
también habrá cogido una ficha y realizado lo que en ella se proponía. El profesor
para aumentar el interés de los alumnos, procurará realizar su acción de la forma
más simpática que pueda, de esta forma los alumnos se verán más motivados a
realizar las suyas en público.
Una vez que todos hayan participado obtendremos unas historias, unos dibujos,
unas redacciones, etc., donde la fantasía, la creatividad, el ingenio y la imaginación
estarán presentes. Las risas y el buen humor no faltarán ya que se suelen dar
circunstancias muy graciosas (los niños son imprevisibles y la imaginación no tiene
límites).
En esta estrategia los criterios de evaluación son similares a los de los juegos
anteriores: