1samuel 18 5-30 PDF

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1Samuel 18.

5-30 Si algo podemos descubrir en ste pasaje de la Escritura es que nuestras actitudes tienen una influencia fundamental en nuestro comportamiento. Aqu veremos la actitud correcta de un siervo de Dios, confrontando las actitudes incorrectas de otro que debera tambin servir a Dios, pero que no lo hace. Porque es esclavo de un poder que le domina. Un invasor que destruye vidas, familias, e iglesias en todo el mundo. Ese poder destructivo causa problemas de salud, rompe amistades, quiebra matrimonios, y roba el poder de la Iglesia. Me refiero al enojo. El enojo no es malo en s mismo. Dios mismo se enoja, contra el mal. Pero nuestra naturaleza cada, corrompe nuestro enojo llevndonos al pecado. Podemos darnos cuenta de estas cosas cuando comprobamos qu enojaba a Jess, y qu nos enoja a nosotros. Todos conocemos Mateo 21.12-14 la limpieza del templo. Jess se enoj porque estaban faltando al respeto a Su Padre Celestial. Su enojo era justo. Nosotros, nos enojamos por egosmo: Porque alguien no nos cede el paso en la carretera. Porque tenemos que esperar en una cola. Porque los nios hacen ruido. El enojo, por las razones justas es productivo. Pero por las razones indebidas es una fuerza destructiva. Dios sabe que casi siempre nos enojamos para mal. Por eso la Biblia ensea que debemos dejar la ira y el enojo. Salmo 37.8; Efesios 4.31. Los psiclogos nos dicen que el enojo es una emocin poderosa que si se reprime puede adoptar muchas formas: Ansiedad, depresin, e incluso puede somatizarse como malestares diversos. Pudiendo llegar a explotar en el momento ms inesperado. Ellos aconsejan que se busquen vas para expresar el enojo sin peligro para otras personas. Y proponen que rompamos coches con un mazo, o vajilla vieja. Ya hay empresas que se dedican a esto en EEUU. Pero eso, lejos de solucionar el problema lo

empeora, pues la persona se acostumbra a dar salida al enojo. NO a controlarlo. Dios, que nos ha creado, quiere que tengamos victoria sobre el enojo destructivo. Por lo cual nos ha dejado varias pautas para alcanzar la victoria. Sal se enoj con David, no por nada que l hubiese hecho. Sino por algo que cantaron las mujeres. Sinti celos, y los celos le llevaron al enojo. Hay dos tipos de celo: A. Celo para bien: Hechos 22.3; Apocalipsis 3.19 B. Celo para mal: Hechos 13.44-45 Como dije, nuestra naturaleza de pecado todo lo corrompe. Qu produjo el enojo en Sal? 9. Que no pudiera ver a David con buenos ojos. 10. Atrajo un mal espritu que le atormentaba. Efesios 4.26-27. 11. Esto le llev a desearle mal. Dese su muerte. Dos veces estuvo a punto de cometer homicidio. La mayora de los homicidios comenzaron con un poco de enojo. Por dos veces David lo evadi 12. Tambin le acarre temores. 13. Lo alej de s. El enojo, te aleja de las personas correctas: Sal tom a David 18.2, y luego lo alej 18.13. A quin tomas y a quin alejas de ti? Por qu? Con qu personas te sientes a gusto? Qu personas te causan fastidio? No todos nos caen igual. Ni siquiera en la Iglesia. 29. Le hizo enemigo de sus amigos. Por todo esto debemos aprender a tratar con el enojo. Pues, como dice el Proverbio 14.17 El que fcilmente se enoja har locuras. Glatas 5.20-21. La ira y el enojo es obra de la carne.

1. El enojo es una emocin engaosa que distorsiona la realidad. Sal se sinti amenazado por David cuando no tena ningn motivo para ello. Mateo 7.3-5. Casi dos mil aos despus de que Jess dijera estas palabras los psiclogos le pusieron nombre a sta reaccin. Se conoce por el nombre de proyeccin. Quiere decir que nosotros tendemos a ver, con mayor claridad en los dems, los errores que son ms grandes en nosotros. Proyectamos en los dems nuestros pecados. El hombre no quiere enojarse consigo mismo por sus pecados. Por eso proyecta sobre los dems la ira que debera llevarle al arrepentimiento. 2. La carne nos lleva a querer ocultar o disfrazar nuestro enojo. Por dos veces, Sal pretende bendecir a David, cuando en realidad desea su mal. El bien puede hacerse para mal. Por motivaciones incorrectas. Sal puso a David en autoridad sobre su ejrcito, pero con la intencin de que cayera en combate. Le dio a su hija por mujer a cambio de que se enfrentara a cien filisteos. Con la esperanza de que alguno de ellos lo matara. Hay que cuidar las motivaciones al hacer lo bueno. Si no controlamos el mal, ste nos controlar a nosotros. Mucha gente padece enfermedades y molestias por tener su corazn lleno de enojo. Otros andan chismeando todo el tiempo, porque no han sabido tratar con su enojo. Si ests lleno de enojo, no puedes estar lleno del Espritu Santo. Si ests lleno del Espritu Santo, no puedes estar lleno de enojo. Glatas 5.16-23. 3. El enojo puede llegar a ser como una droga. Tengo una sobrina que de pequea viva aferrada a una almohada. Esa almohada le daba seguridad. Donde quiera que fuera, la llevaba consigo. Si alguien intentaba quitrsela, poda prepararse para or gritos y llantos.

Cuando el drogadicto la deja, sufre mental, y emocionalmente, e incluso fsicamente. Podemos llegar a ser adictos al enojo. Siempre llenos y a punto de reventar como una olla exprs. En todo este proceso vemos la actitud humilde y prudente de David, diametralmente opuesta a la del rey. Qu produjo la actitud de humildad y prudencia de David? 14. Que Dios estaba con l. 16. Que todo Israel y Jud amara a David. El enojo puede producir daos terribles. No est bien justificarlo diciendo: Yo soy as. O Tiene el carcter de su padre. Cmo eres t? Cules son tus actitudes? Cules tus motivaciones? Cmo quieres ser? Conclusin: Hoy puede ser el comienzo de tu nueva vida. Debes tratar con el enojo. Porque es daino y peligroso. No debemos dormir con enojo en nuestro corazn porque dejar huella en nuestra alma, como una plancha caliente sobre una camisa. Cuando te enojes, mira si es un enojo justo o injusto. Pero sea como sea, trtalo rpidamente. Porque el enojo es una puerta por la que suele entrar el diablo. Si no tratamos nuestro enojo, tendremos que tratar nuestra salud, fsica y mental. El enojo destruye la salud, el bienestar, la familia, e incluso la iglesia. Cmo tratamos con el enojo? Proverbios 11.23 El deseo de los justos es solamente el bien; ms la esperanza de los impos es el enojo. Eclesiasts 7.9 No te apresures en tu espritu a enojarte; porque el enojo reposa en el seno de los necios.

Salmo 37.8 Deja la ira, y desecha el enojo; No te excites en manera alguna hacer lo malo. Proverbios 29.11 El necio da rienda suelta a toda su ira, ms el sabio al fin la sosiega. Efesios 4.26-27 Airaos pero no pequis. No se ponga el sol sobre vuestro enojo. Ni deis lugar al diablo. Santiago 1.19-20 Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para or, tardo para hablar, tardo para airarse; 20porque la ira del hombre no obra la justicia de Dios. Romanos 12.18 En cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos.

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