18 Proyecto de Vida Jóvenes

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ELABORACIN DEL PROYECTO PERSONAL DE VIDA Por qu un proyecto de vida?

- Porque es un medio sencillo que nos permite plasmar-expresar-concretar la voluntad de Dios. - Nos permitir proyectar nuestra vida, matrimonio y familia, en base a lo entendido de Dios. Y ser punto de referencia para evaluar peridicamente, si estamos cumpliendo la voluntad de Dios. - Consiste en trazarse: Un lema, objetivo general y especficos, metas a corto, mediano y largo plazo, identificar las reas a trabajar y horarios. Motivaciones: 1. Ayuda a concretar la voluntad de Dios sobre la persona, matrimonio y familia, y a vivirla. 2. Orienta la existencia y le da sentido a todo lo que se hace, ya que hay un por qu y un para qu claros. 3. Ordena, dando secuencia, escala de valores, horario, disciplina, etc. 4. La previsin y la revisin es la llave del xito lenguaje empresarial-, previendo hasta los posibles fracasos y cadas, para estar preparado. (Jos 1). 5. Imprime en la vida un dinamismo creciente, evitando caer en la instalacin y la mediocridad; lleva siempre a ms. 6. Cultiva virtudes como la esperanza, la constancia, la perseverancia, la paciencia, etc. Frutos: - Responsabilidad Personal, nosotros somos los responsables de nuestras decisiones (no culpar a los otros). Opcin personal. - Personalizacin: Siguiendo a Jess desde lo que yo soy, seguimiento personal. Ser Cristo desde lo que soy de forma real (Aterrizada). - Gozo y paz: de saber que estoy haciendo la voluntad de Dios - Crecer como apstoles- formadores: Que sabiendo a dnde van, puedan orientar a otros con claridad. Nuestra vida tambin es camino para las personas que Dios nos ha confiado. Caractersticas: Es preciso trazarlo sabiamente (Para no abarcar mucho, el que mucho abarca poco aprieta). Qu conviene de acuerdo a la etapa de nuestra vida y de nuestra familia Lo contrasto peridicamente con el Director Espiritual. Evaluar mensualmente para ver si se adapta a la realidad y obligaciones que vivo y contrastar con quien me est acompaando. Tener en cuenta: Luces, qu luz para la vida ordinaria (vida concreta da a da) hemos recibido durante los tiempos de oracin, formacin y ejercicios que hemos realizado. Las diferentes dimensiones de la persona (por ejemplo: nivel fisiolgico, corporeidad, afectivo, espiritual-racional) para un crecimiento integral. Por ejemplo: debemos considerar aspectos como recreacin, estudio, descanso, etc no solo lo espiritual, Dios nos trabaja a nivel INTEGRAL. Es una ayuda especial para los inconstantes, antojadizos, impacientes, perezosos. Con un plan no hay lugar a vacilaciones, educamos la voluntad, aprendemos a disciplinarnos, a ser pacientes. Debe ser realista, acomodado a los deberes de nuestra vida. Se adapte a las necesidades que tenemos. Adems que se adapte a lo que somos a nivel integral, fsico, espiritual. Flexible y rgido a la vez, para no sentirnos esclavizados, cuando la caridad nos lleve a otra cosa, cuando la caridad al prjimo lo exige. Rgido: para disciplinarnos, no darle vlvula de escape. Horario, en el se plasmen los puntos a trabajar. Considerar posibilidad de fracaso (por el pecado, tolerancia a la frustracin, situaciones de enfermedad, etc.) vivir las situaciones con paz, saber integrarlos. Se LUCHA y se SUFRE, pero sabemos a donde vamos. 1. REQUISITOS PREVIOS PARA LA ELABORACIN DE UN PROYECTO PERSONAL DE VIDA.

1.1.

MADUREZ HUMANA Y CRISTIANA. sin ellas sera inviable. Concretando rasgos de madurez destacamos haber verificado que se posee en grado suficiente: Autonoma para tomar en sus manos la propia vida y abrazar sensatas decisiones, elegir y renunciar. Autenticidad para sumergirse serenamente dentro de s e ir creciendo en autoconocimiento y aceptacin. Lo cual supone: Querer iniciar y/o mantener un cierto recorrido de descubrimiento personal. Reconocerse, es decir, no defenderse ni ocultarse a s mismo, sino poderse decir con suficiente lucidez: as soy yo. Aceptarse, es decir, no moralizar con culpabilizaciones enfermizas ni con orgullos pretenciosos; quererse como se es. Discernimiento: apertura al Espritu, nico capaz de iluminar los fondos del corazn y lograr el milagro de hacer salir del connatural narcisismo para confiarse a Dios Padre. Imposible hacer sin un camino previo de personalizacin de la fe, con el que se haya internalizado unos precisos valores evanglicos. 1.2. SUFICIENTE INFORMACIN Y MOTIVACIN. Se trata de tener una idea clara de lo que es un proyecto personal: su finalidad, su conveniencia, su aplicacin, etc. y, a dems una previa motivacin para confeccionarlo, ponerlo en prctica y dejarse acompaar. Sin esas garantas no conviene ofertarlo. Acarreara complicaciones y vacunara a los principiantes para retomar el instrumento en el futuro. 1.3. ELABORACIN PERSONALIZADA. Debe elaborarse en particular. La oportuna discrecin de la propia intimidad siempre ha de quedar garantizada. De ordinario ser oportuna, a veces incluso imprescindible, la ayuda de un acompaante experimentado que oriente y acompae la confeccin y el seguimiento del proyecto. Se esforzar siempre de brindar clidos mrgenes de confianza, discrecin y libertad. 1.4. SEGUIR UN MTODO. Tratar de seguir con rigor ciertos pasos que indiquen claramente la realizacin y el seguimiento fiel del proyecto. El mtodo facilita y agiliza el trabajo. Un buen mtodo se caracteriza por: No ser muy complicado. No moralizar. Recoge toda la complejidad de la vida. Centra y unifica, sin dispersar. No sobrecarga de exigencias. Es muy prctico, sencillo y comprensible. Invita al realismo y a la humildad, respeta la libertad. 1.5. BUSCAR TIEMPO Y LUGAR. Conviene elaborarlo y revisarlo en el lugar y circunstancias convenientes: comienzo del curso o de la actividad pastoral; momento de densidad particular (ejercicios espirituales, acontecimiento significativo, momento de ajuste personal o de grupo, etc.); en lugar tranquilo y sereno, con ciertas comodidades y facilidades para el fin que se pretende (silencio, tranquilidad, tiempo); a ser posible fuera del espacio habitual de vida y de trabajo. Se dispondr, como es obvio, del tiempo suficiente para elaborarlo. 1.6. ADAPTAR EL MTODO AL SUJETO. Tener muy presente la circunstancia de quien lo realiza (edad, cultura, formacin, situacin actual, orientacin vocacional). Es muy importante conocer de cerca su planteamiento personal de vida (opciones, capacidades, necesidades, intereses e inquietudes, posibilidades). El proyecto es para la persona y no al revs. 2. PROCESO DE ELABORACIN DEL PROYECTO PERSONAL. 2.1. MOMENTO DE SENSIBILIZACIN PREVIO. Antes de su elaboracin conviene justificar tericamente y animar adecuadamente la tarea. No se trata simplemente de resolver las dificultades iniciales o de ofrecer las pautas de ejecucin del mismo, sino de motivar exitosamente al sujeto a confeccionarlo. 2.2. LA TOMA DE CONCIENCIA (MOMENTO DE AUTOANLISIS). Este primer ejercicio se orienta a detectar el problema personal central desde el que se entiende la globalidad de comportamientos del sujeto. Conviene tener en cuanta en este paso dos observaciones muy pertinentes: A quienes no hayan realizado ningn tipo de autoconocimiento es preferible invitarles, antes de iniciar el proyecto, a bucear en el anlisis de su realidad y de sus procesos personales; puede resultar iluminadora la confeccin de la propia historia o autobiografa. O que se les simplifique el proyecto personal, centrndoles
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en aquel aspecto concreto a trabajar y madurar de manera que puedan internalizar a corto plazo valores de vida desde donde puedan proyectarla humana y cristianamente. A quienes ya tengan cierto hbito de autoanlisis se les invitar a centrarse en lo esencial. Es decir, a intentar seleccionar aquel problema central y concreto que explica el significado del conjunto de las propias vivencias y comportamientos. Este no es el tema ms importante, sino el que debe ser atendido de la manera ms urgente, porque otras dimensiones de ella estn dependiendo del mismo. Preguntas para la toma de conciencia del problema central: Cmo estoy en este momento de mi vida? Me encuentro centrado en el conjunto de mi vida? Qu asunto me est creando ms problemas, bloqueando o frustrando? En qu aspecto me est afectando y con qu gravedad? Qu espero yo de mi propia vida? Qu aspiracin profunda y positiva me cautiva ms ahora? Cmo la formulara? Qu espero de ella? Qu sentimientos y deseos de cambio produce en m esta toma de conciencia? Qu miedos me acarrea? Qu o a quin temo en la vida? 2.3. DIAGNOSTICO POR REAS. Identificado el tema central se trata ahora, en este siguiente paso, de ordenar la propia vida, aplicando una sencilla metodologa segn los pasos que a continuacin se indican:

2.3.1. INDICACIONES OPERATIVAS: conviene aplicar en el diagnstico los siguientes criterios, recogidos en verbos de accin. Facilitar con su orientacin el trabajo. Recordar. Ms que enumerar acontecimientos o hechos, dejar que fluyan espontneamente revivindolos con el corazn. Nombrar. Poner nombre a los sentimientos y experiencias, legando a identificarlas. Analizar. Aprender a leer lo que pasa. Ver lo que hay detrs de esos acontecimientos y experiencias. Se trata de percibir lo invisible. Relacionar. Buscar relaciones hasta encontrar el sentido del conjunto. Asumir. Es mi vida, mi historia; sin despreciar o deformar nada. Dar sentido. No por ideologa que racionaliza, sino con mirada de fe, orante, que percibe la historia de salvacin. 2.3.2. LAS REAS: En un proyecto de vida cristiana el discernimiento se debe aplicar a cinco reas fundamentales. Se supone bien hecho el trabajo de anlisis previo. Sobre cada rea en particular nos formulamos preguntas que nos ayuden a indagar. Las que ofrecemos son indicativas. 2.3.2.1. DIMENSIN HUMANA. Salud fsica; descanso, ocio y tiempo libre; autoafirmacin y agresividad; afectividad y sexualidad; aceptacin y autoestima; las actitudes existenciales de confianza, apertura, autenticidad; crisis vividas; identidad personal. 2.3.2.2. DIMENSIN RELIGIOSA. Las propias imgenes de Dios; la experiencia afectiva religiosa; la oracin; praxis del discernimiento; pertenencia eclesial e insercin comunitaria; opcin fundamental, actitudes-virtudes y su praxis; la formacin religiosa. 2.3.2.3. DIMENSIN VOCACIONAL. Discernimiento de la vocacin especfica; praxis del seguimiento de Cristo; los compromisos derivados de la propia vocacin o estado (votos o deberes conyugales y familiares). 2.3.2.4. DIMENSIN COMUNITARIA. Relaciones personales; integracin; tratamiento de los problemas; comunicacin; sentido de pertenencia; praxis comunitaria en sus exigencias particulares de convivencia, colaboracin y comunin. 2.3.2.5. DIMENSIN DE TESTIMONIO-COMPROMISO. Trabajo profesional, compromiso, testimonio, opcin por los pobres, capacitacin y formacin permanentes, sensibilizacin hacia las situaciones de necesidad, espiritualidad de la accin. 2.3.3. DIAGNSTICO EN DOS MOMENTOS. 2.3.3.1. PRIMER MOMENTO: DETERMINACIN DE LOS TEMAS EJE. Se comienza analizando por separado cada rea, registrando de cada una de ellas los dos o tres aspectos positivos o negativos ms significativos por su urgencia.
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Una vez terminado el anlisis de las distintas reas y a la vista de los datos recogidos, se debe seleccionar el tema eje de cada rea. Se trata de centrar la atencin en aquel punto que se considera nuclear en cada rea por su resonancia en la vida. 2.3.3.2. SEGUNDO MOMENTO: DETERMINACIN DE LA PRIORIDAD. Del conjunto de todos los temas eje, seleccionaremos a continuacin aquella prioridad que veamos que emerge como la ms relevante (por el influjo que ejerce sobre el resto de las reas; por su peso especfico; por su gravedad). De esta ltima extraemos con precisin sus dos o tres aspectos positivos y negativos ms significativos. Conviene dar un repaso, en este momento, a la influencia real que esta prioridad ejerce sobre el resto de las reas ya analizadas. Es una mirada unificadora de todo el conjunto. Nos ayuda a entender nuestra vida en bloque, con ojo limpio que detecta el alcance del problema central. 2.4. PROYECTO DE ORIENTACIONES DE LA PROPIA VIDA. Todo lo que se indique en este nuevo trabajo lo denominaremos con el calificativo de orientaciones, dado que tiende a expresar un marco de aspiraciones personales hacia las que se desea caminar. No son todas ellas decisiones que comprometan. Abarcaran demasiados aspectos y el proyecto resultara inviable. La sobrecarga de exigencias no es recomendable. Pero si es bueno disear el horizonte de aspiraciones que dan sentido a las determinaciones que se vayan a asumir con determinada determinacin. 2.4.1. DEFINICIN DE LOS OBJETIVOS GENERALES. El paso siguiente consiste en ver con realismo, sin voluntarismos ni proyecciones de la fantasa, hacia dnde conviene caminar, hacia dnde apunta con nosotros el Espritu. Se trata de poner por escrito el ideal al que se aspira en el momento en el que estamos viviendo. Ideal que debe ser razonable, deseado, personalizado, realizable a medio o largo plazo. Debe ser un ideal claro y no muy amplio. Conviene que logre dibujar con autenticidad el rostro actual de la propia vocacin, con perfiles ntidos. No se trata de forzar procesos, sino de abrirse sencilla y pacientemente hacia lo que vaya pidiendo la vida misma y el Espritu renovador, en la medida que se da a conocer y se hace sentir en la propia conciencia. 2.4.2. DEFINICIN DE LOS OBJETIVOS ESPECFICOS. Los objetivos especficos explicitan y hacen viable la consecucin de los objetivos generales apuntados. Deben dar respuesta directa al problema que se ha visto en el diagnstico de la situacin personal y, adems, tener en cuenta los objetivos generales. Estos objetivos especficos deben ser: realistas, prcticos, concretos, convergentes y evaluables. No se trata de anunciar aqu grandes ideales, eso ya se ha hecho en los objetivos generales. Ahora se trata de responder al problema iluminado desde el anlisis de situacin con un objetivo concreto y bien definido. Los objetivos especficos se refieren a aspectos bien concretos de la vida que pueden ser evaluados: si se ha trabajado en ellos o no, si se ha progresado o no. Conviene no rizar el rizo sino centrarse en la prioridad detectada y apoyarla desde las otras reas. 2.4.3. DETERMINACIN DE LOS RECURSOS. Los recursos son aquellos medios concretos que se trazan para pasar de la situacin en el que se encuentra el individuo a la que se aspira. Para poder sealar los recursos pertinentes de debe haber logrado con anterioridad un suficiente autoconocimiento y un pronunciamiento de las opciones que dinamizan la vida. Hay que evitar voluntarismos perfeccionistas o conformismos satisfechos. Los recursos se consiguen llegando responder las preguntas siguientes: Qu voy a hacer?, Cmo lo voy a hacer?, Cundo lo voy a hacer?, Con quin lo voy a hacer? Los recursos escogidos deben tener cuatro cualidades esenciales: Que sean concretos. No se trata de deseos vagos, sino compromisos muy puntuales y concretos. Que sean realistas. No se trata de subir el listn. Una medida sabia es saber poner las cosas ligeramente difciles o ponerse algo menos de lo que uno calcula en el fervor de la confeccin del proyecto. Que sean evaluables. El mismo sujeto debe poder comprobar y medir con facilidad si est cumpliendo o no lo que se haba propuesto. Si el recurso no es evaluable no es buen recurso. Que sean congruentes. Es decir, que deben centrarse y orientarse hacia la prioridad sobre la que se quiere trabajar y avanzar. 2.5. PROYECTO DE DETERMINACIONES SOBRE LA PROPIA VIDA. De las orientaciones vistas y no de otras, se elegirn dos o tres solamente, a las que llamamos decisiones, indicando con ello que son las determinadas determinaciones en las que el individuo se empear duro, sin ningn tipo de concesiones a la pereza. Por ello su eleccin debe ser muy certera y ponderada. 2.6. FIJAR FECHAS Y PROCEDIMIENTOS DE EVALUACIN.
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La evaluacin es una parte esencial del proyecto. Todo proyecto que no se evala, se devala. Por ello conviene sealar tiempos adecuados y amplios para la evaluacin. Sabiendo que es preferible hacer pocas evaluaciones y bien hechas que muchas pero superficiales. Al evaluar el proyecto se est evaluando la propia dinmica de crecimiento o de estancamiento, de aliento o de desaliento, de constancia y de volubilidad, del calado de las propias motivaciones. La evolucin debe centrarse en el eje central o prioridad principalmente. 2.7. UNA SENCILLA REDACCIN ESCRITA DEL PROYECTO FINAL. Es de suma importancia dejar el proyecto por escrito de la forma ms clara y concreta posible. No slo porque lo necesitaremos para hacer la evaluacin, sino porque tambin al expresarnos por escrito precisamos mejor las ideas y atinamos mejor con los objetivos y con las mediaciones. A continuacin presentamos un esquema que puede servir como modelo. FORMULARIO PARA EL PROYECTO DE VIDA I. TOMA DE CONCIENCIA Cmo estoy en este momento de mi vida? Me encuentro centrado en el conjunto de mi vida? Qu asunto me est creando ms problemas, bloqueando o frustrando? En qu aspecto me est afectando y con qu gravedad? Qu espero yo de mi propia vida? Qu aspiracin profunda y positiva me cautiva ms ahora? Cmo la formulara? Qu espero de ella? Qu sentimientos y deseos de cambio produce en m esta toma de conciencia? Qu miedos me acarrea? Qu o a quin temo en la vida? II. DIAGNSTICO POR REAS
REA LO POSITIVO LO NEGATIVO TEMA EJE PRIORIDAD (1 a 5)

DIMENSIN HUMANA

DIMENSIN RELIGIOSA

DIMENSIN VOCACIONAL

DIMENSIN COMUNITARIA

TESTIMONIO Y COMPROMISO

III. ORIENTACIONES
LEMA OBJETIVO GENERAL REAS OBJETIVO ESPECFICO QU? CMO? RECURSOS DNDE? CUNDO? CON QUIN?

DIMENSIN HUMANA

DIMENSIN RELIGIOSA

DIMENSIN VOCACIONAL

DIMENSIN COMUNITARIA

TESTIMONIO COMPROMISO

IV. DETERMINACIONES
QU? DNDE? CMO? CUNDO? CON QUIN?

V. EVALUACIN
QU? DNDE? CMO? 6 CUNDO? CON QUIN?

VI. ELABORACIN DE UN HORARIO SEMANAL QUE RESPONDA A LOS OBJETIVOS QUE NOS HEMOS MARCADO Y A LAS AREAS QUE HEMOS IDENTIFICADO COMO PRIORIDADES. El horario debe ser real y concreto. Tiene el objetivo de plasmar el proyecto en el da a da, a travs de la administracin adecuada de nuestro tiempo. El horario marca nuestras prioridades en el seguimiento de Jess como matrimonio y familia en todas las reas a trabajar de nuestra vida.

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