Ofrenda y Diezmo
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Fumero
PRLOGO
En un lugar indeterminado de Brasil, el lder de una poderosa secta de matiz pentecostal pero que usa mtodos fetichistas en sus cultos celebr un congreso para sus pastores. Haban ms de 500 pastores, pero entre ellos se col, de forma camuflada, un periodista que llevaba tiempo buscando pruebas para desacreditar el evangelio, y a esa determinada congregacin autctona. En este seminario el lder del movimiento dio una charla sobre como persuadir a la gente a ofrendar y deca: - Uds. saben que nuestro pueblo no da fcil cuando apelamos a la razn bblica lgica, es por ello que debemos buscar frmulas que nos permitan tener dinero y atraer a la gente a nuestras iglesias. El usar su credulidad el explotarla puede generar ms ingresos que el pedir ofrendas. Cunto gasta nuestra gente en curanderos, adivinos y brujos? Lo que sea. Cuando hay dolor, miseria y problemas, y se les ofrece una solucin a todas estas cosas, la gente busca ayuda, no importa lo que le cueste. En apuro uno paga todo lo que sea. Recordemos que la vida no tiene precio, y con tal de encontrar salud, riquezas y xito, el hombre es capaz de cualquier cosa. As que debemos ofrecerles a la gente medios que nos permitan sacarles el dinero que necesitamos, un pauelo ungido, un aceite consagrado, o cualquier cosa, a cambio una buena donacin nos permitir tener mejores ingresos en nuestras iglesias. El periodista sali de la reunin, y rpidamente difundi esta noticia, aadindole un poco de ese estilo amarillista que siempre usan algunos medios informativos, causando un escndalo que transcendi a nivel mundial. Cuando veo la televisin evanglica de los Estados Unidos, y contemplo las metodologas que usan estos tele-evangelistas para obtener dinero de la gente, haciendo ofertas engaosas de bendiciones a cambio de donativos, me llevo las manos a la cabeza, y siento que estamos regresando a la edad media, a la versin catlica de las indulgencias y ventas de objetos que son portadores de bendiciones (reliquias). Frente a tales hechos me asusto, y pregunto Ser lgico permitir este tipo de manipulacin materialista e inmoral? No debemos afrontar la manipulacin, intimidacin y chantaje con la verdad proclamada en las Sagradas Escrituras? Se que necesitamos dinero para la extensin del evangelio, pero usar frmulas carnales, mundanas y mercantiles Ser correcto delante de los ojos de Dios? En este libro me dispongo a abordar esta realidad, y deseo establecer los errores y las verdades enseadas por los hombres, y confrontarlas a la Palabra de Dios, para que seamos persuadidos a condenar y denunciar actos que no se ajuste a la verdad. Es correcto traer diezmos y ofrendas a nuestras congregaciones. Ellas velan por nosotros, y son los canales bblicos para extender el evangelio. Sin embargo, actualmente se crean otros mecanismos para obtener dinero con intimidacin o manipulacin, y que es justo aclarar, y eso es lo que vamos a hacer.
Mario E. Fumero
Que lo expuesto sirva para doctrinar a nuestra gente en la forma bblica de dar, y hacerlo de corazn, no por temor, y de forma desinteresada, y no como inversin, aunque Dios premie la dadivosidad. Mario E. Fumero
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dinero el don de Dios! T no tienes parte ni suerte en este asunto, porque tu corazn no es recto delante de Dios (Hechos 8:20-21). Por qu no era recto delante de Dios? Porque quera volver a sus andadas, a hacer dinero a base de las cosas espirituales, explotar la fe. Siempre el cristianismo se ha visto amenazado por la manipulacin mercantil. Con la conversin de Constantino, lo cual trajo ms males que bienes a la Iglesia, se comenz a proliferar el culto a las osamentas de los mrtires. A partir de ah comenz a hacer negocio de todo aquello que tena un matiz religioso. Aparecieron las reliquias portadoras de bendicin y perdn de los mrtires. Al respecto escribe Juan Eslava Galn, catlico y crtico espaol de este fenmeno: El fetichismo mgico de las reliquias, alentado por la jerarqua eclesistica que obtena de l buenos dividendos, tanto espirituales como dinerarios, fue en aumento hasta transformarse en obsesin. Hasta tal punto que a veces la codicia de una reliquia justific extorsiones, asesinatos y hasta guerras[2]. Y fjense hasta donde lleg lo absurdo que incluso las reliquias ms peregrinas hicieron su aparicin en cantidades sorprendentes. En el obispado de Maguncia, dentro de artsticos relicarios, se veneraban plumas y huevos del Espritu Santo. En otro santuario haba estircol del estercolero del santo Job, un producto que, segn la autorizada opinin de san Juan Crisstomo [aumenta la sabidura y fortalece la paciencia][3]. El mercantilismo con las reliquias des-cabell a muchos. Una de ellas fue la madre del Emperador Constantino, llamada Helena, y hecha santa por la iglesia catlica, la cual afirmaba poseer uno de los clavos con los cuales Jess fue crucificado[4]. En el Santuario de Sangensa, en Navarra, Espaa, se venera una supuesta pluma del arcngel san Gabriel. Qu se buscaba con el culto a las reliquias? Atraer peregrinos y obtener ingresos. Convertir el lugar en un centro de fama y poder. A veces para entrar y ver una de estas reliquias se deba aportar una suma determinada de dinero. Si un noble la deseaba poseer para su ciudad, deba pagar a las arca de la Iglesia una gran suma. Era un medio de obtener ganancias econmicas de forma indecorosa, explotando la fe de la gente. Alrededor de estos objetos fraudulentos, como la sbana santa[5], el Grial de Cristo[6], la supuesta madera de la cruz etc., se entretejan cuentos fantsticos que rompan la lgica bblica y humana[7] para producir un gran negocio religioso. No podemos negar que en todas las pocas y de muchas maneras se ha tratado de anular la forma bblica de dar, para introducir frmulas contrarias a la Palabra, como la de usar objetos, fetiche, indulgencias y ceremonias paganas, con las cuales se sobornaba a Dios para que perdonara y otorgara gracia a los que no deseaban arrepentirse y vivir rectamente, de acuerdo a sus postulados, buscando el camino fcil de comprar la bendicin, o el objeto que portaba sta.
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Ha producido el conocimiento de la Palabra una proteccin contra el abuso, el engao y la explotacin de la fe? No, al contrario, algunos manipulando la Palabra han creado otro mercado espiritual idntico al de Efeso y al de Simn el Mago, con la diferencia de que ahora las estrategias son ms sofisticadas, cientficas y persuasivas y para demostrarlo veremos algunos fenmenos que evidencian estos hechos. El desencadenamiento de la reforma protestante surgi a raz de las ventas de indulgencias promovidas por el monje Johann Tetzel, a travs de la cual el papa Len X extenda un perdn que segn su precio, poda perdonar pecados pasados, presentes y futuros[8]. Martn Lutero, el padre de la reforma, se opuso abiertamente a esta explotacin, condenndola con sus 95 tesis clavadas en la puerta de su Iglesia en Wittenberg[9]. Este fue el detonante que origin la reforma protestante. Hoy contemplamos perplejo el resurgimiento de este fenmeno mercantil con las ddivas de Dios en muchas formas, y aqu no se escapa nadie, ni los evanglicos fundamentalistas. Y para que entendamos mejor esta realidad os dar algunos ejemplos: Los catlicos pueden recibir una bendicin papal va correo si escriben a: Elemosineria di Apopstolica, Ufficio Benedizioni Apostoliche, 00129 Ciudad del Vaticano. Para ello se ha nombrado al Arzobispo Oscar Rizzato, el cual fue puesto directamente por el papa para esta funcin. Eso s, la bendicin en un papel pergamino cuesta USA$35.00. Una compaa se dedica a entregar agua bendita del Jordn en la puerta de tu casa. Para ello existe una organizacin llamada Holy Jordan Water Ltd que entrega esta agua acompaada de una bendicin de la Iglesia de la Natividad. El precio es de USD$16.00. En Jerusaln existe una organizacin que se dedica a recibir fax para hacrselos llegar a Dios por una mdica suma. Ellos reciben el fax al nmero (971)2612 222. Y se encargan en colocarlo en el muro de las lamentaciones. Detrs de esta promocin estn los grupos mesinicos.[10] Ahora podramos aadir la realidad evanglica que vemos por televisin. Un evangelista ofrece una bendicin de salud o prosperidad si le envas una ofrenda con tu peticin. l a cambio, te enviar un pauelo ungido. Otro famoso predicador de la televisin ofrece un guila, para que tu fe remonte el vuelo como el guila a cambio de una ofrenda de fe.
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Pero para colmo, tenemos en nuestro poder un poste tamao natural, promovido por Robert Tilton Ministrie, con direccin de Dallas, Texas, y en el cual aparece en tamao natural, con su mano extendida de frente y afirmando que cada da, por 21 das, debers poner tu mano en la suya, y hacer una peticin milagrosa, y cada 7 das le debes enviar una ofrenda de $15, 35, 50, 100 1,000 dlares (Cuanto ms des, ms grande ser la bendicin) y al terminar la tercera semana, recibirs el milagro que pides. No es esto un resurgir del oscurantismo y de la explotacin religiosa? En algunas congregaciones se estila ofrecer bendiciones por medio de objetos, y claro est, su obtencin se logra por ofrendas o ddivas. Tenemos el modelo de una congregacin en donde t puedes obtener por $25.00 dlares un frasquito de aceite trado de Jerusaln para ungir a los enfermos. En otras palabras, de un galn de aceite de oliva, que puede costar unos $15.00 dlares, se obtiene cientos o miles de dlares. Ser correcto este mercadeo de bendiciones? El otro mecanismo usado actualmente es el que podemos definir como manipulacin psicolgica. Consiste en establecer un paralelismo entre el dar y el ser prosperado, o entre el dar y tener bendicin, o el no dar y ser maldecido. En fin, las frmulas manipulativas para ejercer una presin psicolgica en las personas para dar, pueden ir a travs de una inyeccin de codicia, en donde dar es como una inversin en la bolsa de valores (inters que produce avaricia), hasta hacerlo como un medio para evitar enfermedades, calamidad o juicio divido (intimidacin). Que triste es ver muchas vidas destruidas por caer en este tipo de trampas. El otro da una persona me comentaba el caso de una hermana que recibi una enseanza de prosperidad por medio de la cual se le prometi que si peda prestado para darle a Dios el diezmo de todo lo que haba tomado prestado, Dios la sacara de la deuda y la hermana as lo hizo. Como resultado, fue embargada de la deuda anterior y se quedo con la deuda de lo que haba tomado prestado para dar el diezmo. Y ahora qu pasa con esta hermana? Esta frustrada, desanimada y a punto de iniciar una demanda judicial con el tal pastor. Es bblico este proceder? El tema de la intimidacin y el inters perece una mayor consideracin y seguiremos comentando este tema en los prximos captulos.
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imposicin y la coaccin, sino la expresin de gratitud, compromiso y sometimiento al dueo y soberano sobre todas las cosas. En la actualidad hay dos grupos que de forma opuesta rechazan o defienden radicalmente el principio del diezmo como expresin de mayordoma cristiana. Los antilegalistas (no todos, pues algunos atacan de la ley lo que les conviene) condenan el diezmo afirmando que es una imposicin de la ley, mientras otros lo defienden y presentan como una norma impositiva e inviolable, pues el no dar es equivalente a caer bajo juicio y maldicin. El diezmo no fue impuesto por Dios como un medio para obtener de l alguna gracia, sino que aparece como expresin de gratitud y reconocimiento de sometimiento al que es dueo de todo en el A.T. En Gnesis 14:17-24 encontramos que Abraham al recuperar a Lot y sus bienes (vers 16) se encontr con un personaje muy peculiar, Melquisedec, rey de Salem(18), el cual le bendijo ofrecindole pan y vino, por lo que ste (Abraham) le dio los diezmos de todo lo que haba recuperado (20). Le pidi Melquisedec los diezmos? Haba alguna ley sobre primicias o diezmos? Quin era este personaje llamado rey de Salem, que dio pan y vino y que bendijo a Abraham? Aqu nos encontramos delante de una manifestacin de Jesucristo, pues este personaje, que bien poda ser Jess manifestado o alguien con similitud, presentaba algunas caractersticas peculiares como:
1- Se le llam sacerdote del Altsimo cuando todava no exista el sacerdocio levtico (Gn 14:18). 2- Se le llama rey de Salem, refirindose probablemente a la palabra que dio origen a Jerusaln, o el lugar de donde vena. 3- Era rey y a la vez sacerdote, como Jess (Gn 4:18, Zac 6:12-13). 4- Su nombre significa rey de Justicia y rey de paz Atributos que tena Jesucristo (Hebreos 7:2). 5- No tena madre, ni madre ni principio de das, ni fin de vida (proclamando su eternidad) Hebreos 7:3). 6- Ofreci pan y vino smbolos del nuevo pacto hecho por Jess con sus discpulos (Gn 134:18).
Tambin Jacob diezm, pero en esta ocasin l mismo proclam, frente a una experiencia trascendental como la que ocurri en Bethel (Gn 28:10-22), un compromiso con Dios, y noten, no fue nadie quien impuso esta accin, sino que nace como fruto de la experiencia, pues Jacob declar: Esta piedra que he puesto como memorial ser una casa de Dios, y de todo lo que me des, sin falta apartar el diezmo para ti (Gnesis 28:22). Cuando aparece Moiss, Dios pacta con su pueblo un nuevo orden dentro de una nacin que nacera en la tierra prometida, que tendra la misin de proclamar su nombre, y traer al mundo la promesa de Gnesis 3:15 y 11:2-3. Con ellos establece normas de conducta en su expresin de gratitud, legalizndose lo que ya exista en relacin al diezmo, primicias y ofrendas. DIEZMO. Como la palabra lo indica es la dcima parte de todo los frutos de la tierra, ganado o rendimiento del trabajo, Deuteronomio 12:28, 26:12. Con l se supla las necesidades de los levitas (consagrados al servicio del Seor) (Nmero 18:21-32, Deut. 12:17-19) pero tambin se supla la necesidad de los extranjeros, viudas, hurfanos y dems necesitados dentro del pueblo, (Deut. 14:28-29, 26:12).
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PRIMICIAS. Era la accin de traer los primeros frutos de la tierra para ofrendarlos a Dios como expresin de gratitud por la cosecha (x 23:16,19). Esto originaba algunas fiestas como la de la vendimia o fiesta de las cabaas (x 23:16, 19, 34:22, Dt 18:4) y las de la cosecha. OFRENDA. En el A.T. tiene dos connotaciones.
1= Es el ofrecerle a Dios, o un necesitado un regalo de forma voluntaria (xodo 35:29). 2= Ofrecerle a Dios un sacrificio para expresar; a) gratitud o, b) pedir perdn. (Lev cap.1 al 5).
Es bueno apuntar la realidad juda del dar. Para ellos no caba la idea de una accin de entrega en la cual hubiera manipulacin o mecanismos humanos de presin o chantaje. Uno daba porque deseaba obedecer la ley de Jehov, como expresin de gratitud y reconocimiento de la soberana de Dios. As lo ensea el Talmud[15] al referirse a las fiestas de las primicias. Para ellos el dar era algo tan tremendo, que hasta hacan fiestas cuando venan con sus diezmos o primicias: Veamos lo que dice el Talmud: Cmo se llevan los frutos del Templo? Todos los habitantes de las localidades de un mismo distrito[16] se renen en la capital del mismo. Pasan la noche en la plaza, sin entrar en las casas (para evitar contactos impuros). A la maana siguiente temprano, el jefe dice: Venid, subamos a Sin, junto al Seor, Nuestro Dios[17][18]. Tanto el diezmar como el dar las primicias era motivo de fiesta, donde lo ms importante era la sinceridad y espontaneidad del corazn a la hora de dar. No podemos negar que la desobediencia, tanto en la forma de dar como en la forma de vivir produca juicio divino. Las promesas dadas estaban condicionadas a la obediencia, y estas producan la proteccin divina, lo contrario, -la desobediencia- acarreara maldicin. Noten las consecuencias de la desobediencia a la ley de Dios, y no al simple hecho de no dar:Pero si no escuchas la voz de Jehov tu Dios a fin de procurar poner por obra todos sus mandamientos y sus estatutos que yo te mando hoy, todas estas maldiciones vendrn sobre ti y te alcanzarn: (Deuteronomio 28:15). El que no da es porque ya est enfermo, de manera que aunque diera por medio de mecanismo persuasivos, o como forma de soborno espiritual, o para librarse del castigo divino, si no declaraba su pecado, no poda obtener el favor de Dios, aunque ofrendara todas sus posesiones, pues en tal caso, el rey Artajerjes sera justo, ya que dio sus bienes a Nehemas para reedificar los muros de Jerusaln (Nehemas captulo 2). Es importante que cuando el pueblo se apartaba de Dios, primero cayera en la idolatra, despus dejaba de hacer lo recto y una manifestacin de ello es robarle a Dios lo que le pertenece. De dnde sacamos los mecanismos de decir que el no dar trae maldicin?, cuando en realidad la maldicin es un producto del pecado y el dejar de dar es una de las evidencias del pecado, porque se pierde la gratitud a Dios, pues para los judos el dar es manifestacin de gratitud y reconocimiento de la Soberana de Dios sobre los bienes que l nos ha dado. En el Talmud se asocia el dar con dos elementos:
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1 El traba ajo productiv vo ejecutado o por el homb bre como ob bediencia al mandamient to dado en el huerto del Edn E (Gnes sis 3:19). 2 Reconoc cer que Dios s es dueo so obre la creac cin, y que nosotros n som mos sus mayordom mos, por lo qu ue debo traer rle el diezmo o de todo lo que obtenga a como fruto o del trabajo o. Dice el Tal lmud al resp pecto: Acer rca del diezm mo se ha esta ablecido lo siguiente: todo lo que se s come, tod do lo que se conserva c y todo t lo que crece c sobre el e go del diezm mo. Pero aqu uello que al principio p no es suelo est sujeto al pag comestible e, mas luego s, no deber r pagar diez zmo hasta qu ue alcance su s madurez[19].
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Estas son las l normas que q gobernab ban la vida del d pueblo de e Dios, llme ese Israel o la l a del Seor. Iglesia
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(Lucas 18:11-12). Qu demostr Jess con este relato? Qu no hay que ayudar o dar? De ninguna manera, lo que trat de dar a entender es que lo ms importante cuando hacemos algo es la actitud que tenemos, pues el dar o el ayudar se vuelve nada cuando lo hacemos lleno de soberbia y presuncin. l lo afirma en el verso 14 Os digo que ste descendi a casa justificado en lugar del primero. Porque cualquiera que se enaltece ser humillado, y el que se humilla ser enaltecido (Lucas 18:14). Aqu no dice que el publicano no ayunar ni diezmar, sino que se consideraba indigno a pesar de todo lo que haca. En el libro de los Hechos no se menciona el diezmo, afirman algunos, y es cierto. Pero Por qu no se habla del diezmo? Porque los cristianos asimilaran la mayordoma ms all del concepto judo de ser mayordomo de la tierra. Para ellos todo era del Seor y ellos se volvieron sus esclavos. Acaso los esclavos tenan derechos? No era todo lo que el esclavo tena propiedad del amo que lo compr? Si ste tena una mujer, y le daba hijos, pasaban a ser parte del dueo. Todo lo que producan era de su amo y ste le daba lo que l (el amo) quisiera. En el N.T. el trmino siervo[20] aparece 73 veces en 71 texto, y en todo se hace alusin al principio de entrega, sometimiento, propiedad absoluta de alguien que nos posee como esclavo, no porque me haga esclavo por la fuerza, sino porque me humillo y sujeto a su Palabra, como hizo el mismo Jess (Juan 13:15-16) sujetndose al padre hasta la muerte, y afirmando que nosotros no somos mejor que l (Juan 15:20).Debemos proclamar su Seoro sobre nuestra vida, y convertirnos en siervo (Mateo 25:21-23). As que todo lo que tengo es suyo, y aun yo mismo le pertenezco, porque he sido comprado (1 Pedro 1:18) con precio de sangre. La idea de que somos comprados est presente en la mente del los cristianos primitivos: Pues habis sido comprados por precio. Por tanto, glorificad a Dios en vuestro cuerpo (1 Corintios 6:20). Por precio fuisteis comprados; no os hagis esclavos de los hombres (1 Corintios 7:23), y Pablo nos ordena que no seamos esclavos de los hombres para que podamos ser fieles soldados de Jesucristo pues el mismo ensea que Ninguno en campaa militar se enreda en los negocios de la vida, a fin de agradar a aquel que lo alist como soldado (2 Timoteo 2:4). Los conceptos siervo, comprados, soldados nos colocan como un todo bajo la proclama del Seoro de Cristo. As que aqu la entrega debe ir ms all del diezmo, todo lo que tengo es suyo y si le doy algo (el diezmo) es para cumplir la palabra, pues el otro 90% lo debo usar para vivir para l segn su Palabra. Es por esta razn que en el libro de los Hechos aparece un fenmeno, tpico de un avivamiento de amor. Noten lo que dice sobre la conducta de los cristianos primitivos respecto al dar:No haba, pues, ningn necesitado entre ellos, porque todos los que eran propietarios de terrenos o casas los vendan, traan el precio de lo vendido (Hechos 4:34). Por qu lo hacan? Hubo alguna orden, o fue una expresin espontnea? El dar, sean diezmos, primicias u ofrendas, se expone en el N.T, como una virtud que nace del amor y no del chantaje o de la imposicin. El relato de la viuda que dio todo lo que tena revela la mentalidad de Jess al respecto. Qu nos hace ms aceptas delante de Dios, la cantidad, la exhibicin, el montaje a la hora de pedir, o la sinceridad y espontaneidad que tengamos? Noten bien lo que dice el texto sagrado:Estando Jess sentado frente al arca del tesoro, observaba cmo el pueblo echaba dinero en el arca. Muchos ricos echaban mucho, y una viuda pobre vino y ech dos blancas, que equivalen a un cuadrante. El llam a sus discpulos y les dijo: De cierto os digo que esta viuda
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pobre ech ms que todos los que echaron en el arca. Porque todos han echado de su abundancia; pero sta, de su pobreza, ech todo lo que tena, todo su sustento. (Marcos 12:41-44). Noten de su pobreza, ech todo lo que tena. Cul era su mrito? Darse al dar. La bendicin no est en la cantidad, sino en la entrega que hacemos cuando damos algo. Ella no dio esperando multiplicacin, ni motivada por tener dividendos. Dio porque amaba. Es bueno definir el trmino dar en su sentido griego. Viene del vocablo apodidomi y se define como; Cumplir un deber contrado hacia otro, dar lo que es debido, devolver, recompensar, restaurar[21]. En el diccionario de la lengua espaola se define como; donar, entregar, conferir, dar fruto de la tierra etc.[22]. Jess orden dar, no solo la capa, sino tambin el manto, o sea ir ms all de lo estipulado por la ley (Lucas 3:11) y estableci la bendicin que es dar, porque con la medida con que demos, Dios nos recompensar, pero cuidado! no usar este argumento como mecanismo de chantaje, porque en tal caso, se pierde el sentido bblico del dar. Est claro que la accin del dar en el N.T. es producto del nuevo nacimiento, de la gratitud expresada a Dios con una primera entrega, MI VIDA, y despus con todo lo que yo tenga y poseo. Cunto debo de dar?, dice la Palabra Cada uno d como propuso en su corazn, no con tristeza ni por obligacin (2 Corintios 9:7). As es que no estamos atados al diezmo, si optamos por el ejemplo apostlico, daremos ms que diezmo, lo damos todo si fuera necesario. Y por qu debemos de dar? Porque Ms bienaventurado es dar que recibir. (Hechos 20:35). Y como debo de dar?, por compromiso, chantaje, inters o manipulacin? Noten la afirmacin apostlica:d como propuso en su corazn, no con tristeza ni por obligacin; porque Dios ama al dador alegre (2 Corintios 9:7). Y cul debe ser el fin de las ofrendas? Suplir todas las necesidades de la familia de la fe, comenzando por las necesidades de los obreros porque el obrero es digno de su salario (Lucas 10:7) y despus la necesidad de todos los dems hermanos de la congregacin, dando origen al diaconado, como expresin de ayuda entre los hermanos ms desposedos. El mismo San Pablo establece este principio de dar para remediar el dolor de otros hermanos (1 Corintios 16:1-4) al pedirle a los corintios que renan las ofrendas los primeros das de la semana, para enviarlas a las iglesias o hermanos necesitados, como l lo ense en las dems iglesias de Galacia. Las evidencias revelan que as hizo la Iglesia los primeros 300 aos del cristianismo, el historiador Eusebio de Cesrea[23] comenta el hambre que hubo en Judea, y como los hermanos de Antioqua enviaron ayuda a Judea por medio de Pablo y Bernab, relato que tambin aparece en los Hechos de los apstoles[24]. Son todos los diezmos para el pastor? Debe la iglesia invertir los mismos solamente en lo que es la infraestructura del edificio y bienestar? Los hechos bblicos revelan que de las ofrendas y diezmo se debe suplir la necesidad de los santos, comenzando con los que predican la Palabra y terminando por los necesitados de la comunidad, as como ayudar a las viudas y los hurfanos que hayan en la Iglesia[25]. Tengamos claro estas verdades, y notemos que en ningn pasaje se habla de dar como inversin, con intimidacin y como mensaje central de la proclama apostlica, sin embargo la gente lo daba todo, hasta su vida. Pero cul es la realidad en estos tiempos en torno al dar? Este ser un captulo aparte.
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1ro- Los que apelan a la ambicin, usando el chantaje y la oferta mgica. 2do- Los que apelan al temor, usando el juicio y el castigo (intimidacin) para el que no ofrende. 3ro -Los que apelan al uso de objeto (fetiche) para trasmitir bendicin a travs de una inversin en determinado punto de contacto.
EL QUE APELA A LA AMBICIN. El mtodo que apela a la ambicin alienta la avaricia, con una oferta multiplicadora en el acto de dar. La especialista en ensear y difundir esta idea fue Gloria Copeland con su enseanza sobre la centuplicacin[28] y difundida por John Avanzini, el cual promueve en un libro las 24 cosas que pueden traer bendicin a tu vida, y casi todas tienen que ver con el dar y el prosperar[29]. Este principio toma el hecho del texto que dice El que siembra escasamente cosechar escasamente, y el que siembra con generosidad tambin con generosidad cosechar (2 Corintios 9:6) y lo juntan con Lucas 8:8 Y otra parte cay en buena tierra, y cuando creci, llev fruto a ciento por uno para entonces pedirle a la gente que d diez, para que
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Dios le devuelva mil, y con este llamado a invertir en la bolsa de valores de Dios se desencadena la ambicin por dar tan solo para recibir la bendicin de la multiplicacin. Esta es una clara manipulacin, y ninguna enseanza bblica respalda que hay que dar para obligar a Dios a que nos devuelva lo dado, multiplicado. La Biblia promete que Dad, y se os dar; medida buena, apretada, sacudida y rebosan-te se os dar en vuestro regazo. Porque con la medida con que meds, se os volver a medir (Lucas 6:38) pero esta accin de dar no puede ser originada por un inters, porque en tal caso, Dios es como un banquero, los predicadores, los promotores de la bolsa de valores, y los cristianos inversionistas. Jess conden pblicamente la avaricia: Mirad, y guardaos de toda avaricia; porque la vida del hombre no consiste en la abundancia de bienes que posee Lucas 12:15 y sin embargo No promueve esta modalidad de pedir el deseo de tener y el inters por poseer? Jess elogi a la viuda porque al dar todo lo que tena no esperaba nada a cambio, esto es sinceridad, lo contrario es inters, y jams Dios bendice los actos interesados. Dios bendice, pero nuestra accin no debe ser para comprar la bendicin de Dios. APELAR AL TEMOR PARA PEDIR De la misma manera en que algunos le prometen la multiplicacin al que d, otros intimidan al que no da, anuncindole juicio, calamidad y enfermedad. Podemos poner el ejemplo de un predicador que por televisin dijo Si tu no envas ahora mismo tu ofrenda a esta causa, Dios puede pasarte la cuenta a travs de alguna enfermedad, y gastars ms de lo que ahora l te est pidiendo. Un especialista en esta tcnica es Oral Roberts, pues en una ocasin envo una carta a sus admiradores y televidentes dicindoles que: Una prueba le sobrevendr con enfermedad, pero usted puede evitar esta calamidad, enviando una semilla de fe y no tan solo le permitir detener a Satans en el odio con que quiere aplastarlo, sino que tambin le proporcionar ayuda de una devolucin centuplicada[30]. Es indudable, que el que no anda con-forme a lo ordenado por Dios, puede sufrir las consecuencias de su pecado, pero De qu vale dar dinero para comprar proteccin, si andamos fuera de la voluntad de Dios? Este tipo de oferta Coercitiva me suena a las indulgencias de la edad media, en donde por miedo al infierno o purgatorio se pagaban dispensas y bulas a la Iglesia a fin de obtener el favor de Dios. Esta prctica adems de ser indecorosas est contra toda enseanza bblica en la forma en que se aplica, aunque los que la predican saben muy bien manipular algunos textos para apoyar sus pretensiones, y no podemos negar que la intimidacin produce buenos resultados principalmente en aquellos que no estn muy seguros de su salvacin y de la verdad bblica. Lo triste es que detrs de todo esto se esconden hombres amadores de los deleites ms que de Dios (2 Tim 3:4) por los cuales han venido escarnios y afrentas a la iglesia del Seor[31].
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EL USO DE OBJETOS COMO PUNTO DE CONTACTO. Este mtodo, muy antiguo y de prctica comn en la edad media, ha resurgido acompaado con uno que otro versculo bblico. La Iglesia Universal de Brasil lo practica, pero mucho antes de que este grupo lo adoptara, como mtodo atractivo y de rentabilidad, los tele-evangelistas lo comenzaron a utilizar, entre ellos hemos mencionado la oferta de Robert Tilton y su gran maestro Oral Roberts. Tilton, adems de hacer un poster (o afiche) suyo con su foto y su mano, para trasmitir bendicin, explot en su tiempo el pao de tela verde que enviaba por correo a los que se lo pidieran, claro est, con una ofrenda de fe[32]. De igual forma Oral Robets, y su hijo Richard, ofrecieron una foto de ambos a aquellos que les escribieran haciendo una peticin de fe (acompaada la carta de una buena ofrenda) y por medio de la foto recibirn la uncin. Hay que sumar las ofertas del aceite de Jerusaln, con poderes milagrosos, agua del Jordn y un sin nmero de supuestos objetos portadores de bendicin, prosperidad, salud y poder. Este mtodo, que deja buenas utilidades, y que es un culto a dolos con poderes mgicos, est de moda en las iglesias que tienen la doctrina del punto de contacto como medio para recibir bendicin. T compras tal objeto y por medio del mismo llevas la bendicin a tu casa, o envas una ofrenda con una peticin, o con una foto, y de igual forma el ungido ora por ti, para que el todopoderoso te bendiga. No suena esto a un mercantilismo idoltrico, anti bblico y que tiene pinta de ser ms negocio, que Palabra de Dios. Pudiramos citar otras muchas metodologas fraudulentas que tratan de obtener dinero, beneficios, dcese que para la obra de Dios, pero la Biblia establece que sern nuestras ofrendas y diezmo trados a la congregacin, y dados con alegra y corazones sinceros y rectos, los que harn que Dios bendiga su obra, y extendamos as el reino de los cielos en la tierra. Cualquier otra tcnica que no sea esta, lo siento mucho, pero es contraria a las enseanzas bblicas. Las bendiciones vienen por la obediencia, no por chantaje. A Dios no se le compra, ni el especular con sus bendiciones. Las actitudes cuentan ms que las acciones. Y por ltimo, siento tristeza cuando pblicamente se piden ofrendas partiendo de grandes cantidades -Quin da mil?, un aplauso. Quin da quinientos?, ahora valientes que den 200, y otros que den 100 y los que solo pueden dar 5 10 se sienten humillados, cobardes, frente al auditorio, pero los que dieron ms, hasta se les exalta. Como aplicar aqu aquel texto que dice; Pero cuando t hagas obras de misericordia, no sepa tu izquierda lo que hace tu derecha, de modo que tus obras de misericordia sean en secreto. Y tu Padre que ve en secreto te recompensar (Mateo 6:3-4). Algunos dirn, aqu se refiera a dar limosna pero no!, de forma global, el dar es una accin ntima con Dios y con mi Iglesia. No obedece a ninguna otra oferta fuera de estas bases, que son Bblicas.
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No dejemos de dar lo que es necesario dar, tu vida, tus bienes, tu tiempo, pero dadlo a causas justas, con amor, y por medio de tu congregacin. Se ntegro y sers bendecido. No hagas nada por competencia, por presuncin, o por inters, pues en tal caso pierdes la bendicin de dar. Evita la manipulacin, y reprende el chantaje. Da con conviccin, Trae tus diezmos al alfol y veras la bendicin como fruto de obedecer la Palabra de Dios. AMEN
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BIBLIOGRAFIA
[1]- Ver Valores y Antivalores Cristianos Segunda parte. Mario Fumero, producciones Peniel, 1998. [2]- Del Libro El Fraude de la Sbana Santa y las Reliquias de Cristo. Editorial Planeta, Espaa. 1997, pgina 13. [3]- Idem al anterior, pgina 14. [4]- Erasmo y Espaa Marcel Bataillon. Fondo de Cultura Econmica de Espaa, S.A. Madrid, 1983. [5]- El enigma de la Sbana Santa P. Guirao, Editorial Libroexpress, Barcelona, 1989. [6]- El Crial naci en Espaa Rafael Alarcn, Edit. Ao Cero Num. 47, Madrid, Septiembre 1994. Pginas 36-42. [7]- Ver La Leyenda Dorada de Santiago de Voragine. Editorial Alianza, Madrid, 1982. [8]- La proclama de Tetzel deca Tan pronto como la moneda en mi cofre suena, el alma sale del purgatorio sin pena. [9]-Martin Luther and the Birth of Protestantism J. Atkinson. Basingstoke, 1982 [10]- Estos hechos han sido publicado y relatados por la revista Colors, Volumen VIII edicin especial sobre religin. Editor in Chief; Tibor Kalman, Budapest. [11]- Diccionario Enciclopdico Uno Editorial Uno, Espaa, 1996. [12]. Our Responsability for the Living Environment Church of England Board of social Responsability, Londres 1986. [13]. The Atonement L. L. Morris. Editado en Leicestar, 1983. [14]-Teologa sistemtica Editado por Stanley M Horton, Editorial Vida, 1994, pgina 346. [15]- El Talmud es la doctrina tradicional del judasmo y constituye la obra de los santos padres del judasmo. Este atesora el patrimonio, material y espiritual del pueblo judo. [16]- Palestina estaba dividida en veinticuatro distritos. [17]- Haciendo referencia a Jeremas 31:6. [18]- Antologa del Talmud Editorial Plaza & Janes, Editado en Barcelona 1982. Tratado de Bikkurim 113, pgina 79. [19]- Tratado de Maaserot 108 del libro Antologia del Talmud Editado por Plaza& Janes, 1982, Barcelona, Espaa. Pgina 74. [20]- Ver el libro El Principio de Ser Siervo de Mario E. Fumero, producciones Peniel, 1997. [21]- Diccionario de Strong #591.
Mario E. Fumero
[22]- Diccionario Enciclopdico Ocano Uno, editorial Ocano 1996. [23]- Uno de los primeros historiadores de la Iglesia. Se cree que vivi alrededor del 265 d.C y su historia de la iglesia da mucha luz sobre los acontecimientos durante los primeros 200 aos del cristianismo. [24]- Historia Eclesistica -I- Eusebio de Cesrea Editorial Clie, Barcelona, 1988, pgina 90. [25] Cuando la Iglesia perdi la Sencillez Mario E. Fumero, Producciones Peniel, 1996. [26]- Un libro del cual muchos predicadores de la prosperidad han obtenido ideas de manipulacin econmica mendiante la mal llamada teologa de la prosperidad ha sido La Actitud Mental Positiva de Napoleon Hill y W. Clement Stone, editado en Lima, Per, 1993. [27]. La Fe Mgica Escrito por Claude Bristol. [28]- Gods Will Is Prosperity Gloria Copeland, Tulsa Oh, publicado por Harrison Houses 1978. [29] -Its Not Working, Brother John John Avanzini, Publicado por Harrison Houses, 1992Tulsa Ok, [30] -Carta de Oral Roberts dirigida a los hogares,Enero 1 1985. [31] El Sindrome de Lucifer Caio Fabio, editorial Logos. 1988. [32] Carta enviada a los hogares en el 1990.
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