TESTIMONIO EN TIERRAS MUSULMANAS

GILBERTO ORELLANA

TESTIMONIO EN TIERRAS MUSULMANAS Gilberto Orellana Estilo: Viviana Hack de Smith Cubierta: Josanar PM Internacional Apdo. 573 - 18080 Granada - Espaa www.pminternacional.org - [email protected] Los contenidos de la Coleccin Musulmania no siempre se corresponden con la opinin de los editores. Se publican, sin embargo, como un medio para fomentar el intercambio de diferentes puntos de vista y motivar a la reflexin. Las citas bblicas, a menos que se indique otra cosa, han sido tomadas de la versin Reina-Valera 1960. 2008 Primera edicin

ndice

Prlogo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9 1. Breve bosquejo autobiogrfico . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 11 2. El islam tradicional o popular . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 21 3. Orgenes de la raza rabe . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 31 4. El islam . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 37 5. El Corn . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 51 6. Divisiones del islam. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 67 7. La Biblia y el Corn. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 77 8. Prueba de fuego. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 97 APNDICE. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 117 A. Diario de conversaciones . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 119 B. Cuentos y chistes rabes. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 133 C. Cristianos de Marruecos bajo acoso . . . . . . . . . . . . . . . . . 143

Dedico este corto trabajo a mi esposa Ruth, y a mis dos hijas, Noem y Rebeca, fieles compaeras en la cosecha espiritual.

Prlogo

INCENTIVADO por las palabras de nimo de varios hermanos en la fe pidindome que escribiera las experiencias vividas en el norte de frica, y a la vez consciente de la gran necesidad espiritual latente en la comunidad musulmana, he querido plasmar en esta breve resea autobiogrfica las impresiones ms relevantes adquiridas en dicho lugar. Adems de analizar y comentar aspectos propios de la cultura musulmana, planteo el gran dilema del rechazo total por parte del islam hacia el cristianismo. En mi afn por averiguar la raz de este problema he examinado cuidadosamente la Biblia y el Corn, y he podido constatar que son libros que no coinciden en sus enseanzas. El punto principal es que la Biblia dice que el Seor Jess perdon pecados, muri en la cruz, resucit al tercer da y que l es el Cristo, el unignito Hijo de Dios nacido en forma milagrosa por el poder del Espritu Santo. El Corn, por su parte, niega rotundamente estos hechos. Por lo tanto, debemos considerar las 9

evidencias ms fehacientes a fin de emitir un veredicto justo y fidedigno. De las muchas evidencias histricas y cientficas que corroboran la autenticidad de la Biblia, se citan y analizan aqu algunas de ellas, con el nico propsito de esclarecer la verdad. Espero, y es mi oracin, que este corto y sencillo trabajo brinde cierta orientacin a hermanos en la fe interesados en compartir las buenas nuevas al mundo musulmn, y asimismo proyecte un rayo de luz y esperanza en la mente y corazn de aquellos que an no conocen al Seor Jess (Sidna Asa) como su Salvador personal. Quiero tambin dejar constancia de mi ms profundo agradecimiento al Dr. Don McCurry, quien con su enorme experiencia y profundo conocimiento ha enriquecido mi comprensin acerca del islam a travs de los cursos ofrecidos por el Instituto Iberoamericano de Estudios Transculturales (IIbET), en Espaa. EL AUTOR

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1 Breve bosquejo
C A P T U L O

autobiogrfico

Con la msica desde la niez

sobre su cabeza, largas vestimentas blancas y luenga barba tocaba su violn mientras ascenda sobre una especie de pirmide. Las notas musicales se dejaban escuchar hasta los ms recnditos rincones del lugar. A medida que aquel hombre ascenda, el agreste paisaje iba paulatinamente cobrando vida. El cielo gris tornbase en un esplndido lienzo azul, en medio del cual brillaba el sol con sus vvidos rayos de luz y todo alrededor pareca elevar un canto de alabanza al Creador. ste era el sueo que mi padre, quien es msico y compositor, sola tener, y que siempre me comparta desde que yo era muy pequeo. Asimismo, me hablaba de la grandeza de Dios revelada en los distantes astros, en el inescrutable mar y en todas las cosas hermosas que nos rodean.
N HOMBRE CON UN TURBANTE

Tambin me hablaba del bello sonido del violn, que para l 11

era como la voz de un ngel. Exaltaba la belleza de la msica, la cual consideraba como un regalo de Dios. Creo que toda esta influencia directa de mi padre obr en gran manera para que en m se despertara un afecto muy especial hacia ella, y en particular hacia el violn. Fue as que, a la vez que realizaba mis estudios, mi padre me instrua en los primeros rudimentos musicales. Mi inters por este arte creca de tal manera que lleg a convertirse en la prioridad de mi vida. Profesaba el catolicismo y era muy religioso, pero en realidad llevaba una existencia con un corazn vaco, cediendo al pecado y a las tentaciones que me rodeaban. Lo que ms ansiaba en mi juventud era descollar como un gran artista. Esto me llev a convertir la msica en mi dolo y a desplazar a Dios del primer lugar que le corresponda en mi vida. Despus de obtener mi diploma de violinista en mi pas, El Salvador, tuve la oportunidad de proseguir mis estudios en los Estados Unidos en 1968. A estas alturas mi vida estaba todava vaca, sin verdadero propsito, y me senta muy alejado de Dios.

Encuentro con el Seor

Un da, al encontrarme estudiando en un parque, preparndome para un examen, fui abordado por tres tmidas seoritas, quienes me expusieron el plan de salvacin de Dios a travs de versculos bblicos. A pesar de la clara explicacin de lo que el Seor Jess haba hecho por m, no quise creer. No obstante, ellas me dejaron un panfleto que hablaba acerca de las cuatro leyes espirituales. Pocos das despus, al ver mi pecaminosa condicin espiritual, comprend que Cristo realmente me amaba. Me arrepent de mi mal proceder, confes mis pecados a Dios y le abr mi corazn. A partir de aquel momento, mi vida empez a cambiar con un poder sobrenatural. Busqu reunirme con las personas que me haban 12

hablado de Cristo; las encontr y empec a salir a testificar con algunos hermanos que formaban el grupo. Solamos ir al aeropuerto de la ciudad y a algunos parques para comunicar las buenas nuevas. Transcurrieron algunos aos; mi conocimiento en el Seor creca, y en 1972 obtuve mi diploma de maestra en Composicin Musical. Regres a mi pas y despus de dos aos, el Ministerio de Educacin me ofreci el puesto de director de la Orquesta Sinfnica Nacional, cargo que acept. Dos aos despus conoc a quien sera mi esposa y quien ha sido una gran bendicin para mi vida. Con ella nos involucramos seriamente en varios ministerios de nuestra Iglesia Bautista Miramonte. Yo funga como dicono y como director del coro, y mi esposa, como responsable del ministerio femenino, encargada de la Cena del Seor y del ornato del templo. Juntos ramos los lderes del ministerio de matrimonios y tenamos tambin una clula de oracin en nuestra casa. En mi trabajo secular con la orquesta, aprovechaba los momentos fuera de ensayo para compartir la Palabra con algunos de los profesores miembros del conjunto. A Dios gracias, hubo fruto espiritual. Sin embargo, despus de once aos de labor en dicha institucin, fui llamado por las autoridades del Ministerio de Educacin, quienes me dijeron que haban decidido destituirme porque yo estaba convirtiendo la orquesta en una iglesia. Siete duros meses siguieron para m y para mi familia. Pero el Seor siempre estaba con nosotros supliendo nuestras necesidades, algunas veces en forma sobrenatural. Despus de esa prueba, el Ministerio de Educacin me ofreci el puesto de director de la Orquesta Sinfnica Juvenil. All, el Seor tambin me permiti compartir el evangelio, esta vez a los jvenes. Y tambin hubo fruto espiritual. 13

Llamamiento del Seor

En 1988, estando con mi esposa en una vigilia de nuestra iglesia, el Seor puso carga misionera en nuestros corazones al escuchar el testimonio de un misionero que haba estado en el norte de frica, quien nos hizo ver la gran necesidad espiritual en esos lugares. Adems de muchas cosas interesantes, nos comparti que el arte en sus diferentes expresiones era una puerta abierta muy til para comunicar las buenas nuevas. Empezamos a orar mucho por aquella carga espiritual y, especialmente, por Marruecos. Luego lo compartimos con nuestros pastores y diconos, quienes nos animaron a seguir orando y a prepararnos. Un da (no s si despierto o semidormido) vi una multitud de maniques sin rostro, desnudos, caminando lentamente en el desierto. A medida que caminaban se iban hundiendo lentamente en la arena de aquel rido lugar. Esto me incentiv aun ms para prepararme. Estudiamos por tres aos en el instituto bblico, recibimos un adiestramiento, y en enero de 1992 fuimos comisionados por nuestra iglesia. En ese mismo mes llegamos a Mlaga, Espaa, donde fuimos recibidos muy fraternalmente por los hermanos de la Iglesia Evanglica Betel, con quienes permanecimos durante algn tiempo recibiendo otro mdulo de adaptacin transcultural impartido por el Programa Alhambra. Los hermanos que nos preparaban creyeron que tendramos que pasar un mes, o a lo sumo mes y medio en Espaa, esperando nuestro visado. Sin embargo, tuvimos que esperar seis meses! Esto nos afect, pues habamos sido preparados para enfrentar el choque transcultural en Marruecos pero no en Espaa. Aunque se creera que por el hecho de hablar espaol no debamos temer ningn choque, la verdad es que no fue as ya que es una cultura 14

diferente de la nuestra. Una de las caractersticas sobresalientes es su objetividad, no se andan por las ramas para decir las cosas y dan la impresin de ser personas pesadas, aunque en realidad no lo son, sino que es parte de su cultura. Esto, comparado con la manera tmida, sencilla y dulce de un centroamericano, representa un contraste muy marcado, que fcilmente puede causar un choque transcultural. Un da (estbamos recin llegados a Espaa) nos visit un amigo por la maana y le pregunt qu deseaba tomar, si caf o leche, a lo cual me respondi: No me importa!. En la cultura centroamericana esto sonara muy spero y descorts, pero en realidad equivala a: Como usted guste, por favor!. Tambin hay que considerar la semntica que se usa en la regin de Andaluca, diferente de la latinoamericana. Por ejemplo, lo que para un latino es un carro o automvil, para ellos es un coche; bao, vter; trapeador, fregona; refrigerador, nevera; computadora, ordenador; guineo o banano, pltano; mayonesa, mahonesa; nio, cro; trabajar, currar; no se da cuenta, no se entera; tiene razn, lleva razn; qu gracioso, qu mono; increble! no vea!; cincho, cinturn; cartera de mujer, bolso. Despus de poco tiempo de conocer a alguien, en la mayora de los casos se tiene que tutear. Esto fue bastante difcil para m, porque aun mi padre siempre me ha tratado de usted. Es curioso tambin que en la regin andaluza, donde nosotros vivamos, omiten ciertas letras al hablar, como por ejemplo: pescado, pescao; cansado, cansao; pesado, pesao. Algunas veces omiten slabas. Una seora dijo: Te que ta quit!, queriendo decir: Este que est aqu atrs. Tambin cambian la letra ele por la erre; como en espalda por esparda; saltar por sartar; delfn por derfn; bolsa por borsa. Durante nuestra estada en Mlaga nos dimos cuenta de que 15

en esa ciudad vivan muchos musulmanes, por lo que decidimos desarrollar un ministerio dirigido hacia ellos junto con varios hermanos de la Iglesia Betel. El ministerio consista en buscarles, especialmente en el puerto de la ciudad, entablar una conversacin con ellos y luego hacerles entrega de un bolso conteniendo una botella de agua, una Biblia en rabe, un vdeo de la pelcula Jess y alguna literatura cristiana en rabe.

Entrada al lugar de la batalla

En abril de ese mismo ao hicimos un corto viaje exploratorio a Marruecos para ver de cerca y palpar la cultura en que bamos a vivir. Despus de esa visita partimos en julio para radicarnos definitivamente en una ciudad situada al norte de dicho pas. Yo llegu respaldado por una carta de invitacin de parte del conservatorio de msica de esa ciudad para colaborar como profesor de violn y armona. Quienes haban dirigido nuestra preparacin nos haban dicho que durante el primer ao nos abstuviramos de compartir el evangelio y que nos concretramos slo a hacer amigos. Sin embargo, fue maravilloso ver cmo el Seor nos proporcionaba muchas oportunidades para compartir el evangelio entre vecinos, profesores y alumnos del conservatorio de msica. ramos conscientes del peligro que significaba el compartir las buenas nuevas entre musulmanes; sin embargo, el Seor nos animaba a hacerlo a travs de muchos pasajes bblicos, especialmente el que se encuentra en Isaas 1.58: Clama a voz en cuello, no te detengas; alza tu voz como trompeta, y anuncia a mi pueblo su rebelin y a la casa de Jacob su pecado. Inspirados por este hermoso pasaje y en obediencia a este mandato de Dios, empezamos a compartir su Palabra. Una de las ventajas de estar en el norte del pas, fue el hecho de encontrar a 16

muchos marroques hispanohablantes, por haber sido esta regin una colonia espaola. Tambin hubo ocasiones en que forzosamente tuvimos que comunicarnos en francs o en rabe dialectal, sin embargo casi siempre lo hicimos en espaol. Es preciso aclarar que en todo pas musulmn hay dos clases de idioma rabe: el dialectal y el clsico. El dialectal es el que se habla coloquialmente y vara segn el pas. El clsico, que por cierto se usa en el Corn, es hablado en todo pas islmico, pero slo por las personas cultas que han tenido cierta formacin. El rabe clsico tambin es el que se usa en la radio, televisin, peridicos y otros medios de comunicacin. El coloquial se escribe muy poco. En Marruecos la lengua oficial es el rabe, y la segunda es el francs, el cual se habla ms al sur. El espaol se habla sobre todo en la regin norte.

Estrategias para comunicar el evangelio

Una de las estrategias que empleamos a menudo para desarrollar una buena amistad con ellos fue invitarles a casa para tomar una taza de caf o t, ofrecerles un platillo de comida tpica de nuestro pas, hacerles or alguna msica representativa de nuestra cultura o mostrarles estampas tpicas de nuestro folklore. Ellos, por su parte, eran muy amigables y hospitalarios. Cuando les visitbamos eran muy atentos y nos hacan comer mucho. Despus de haber ganado su confianza, empezbamos poco a poco a compartirles el mensaje de la cruz. A fin de que tuvieran una clara concepcin de lo que es el evangelio y los elementos que le son propios, tuvimos que explicarles el significado de palabras claves como por ejemplo: amor (gape), pecado, misericordia, sacrificio, mesas, resurreccin, arrepentimiento, salvacin, vida eterna, Espritu Santo, tradicin, cultura. Otra manera de compartir el evangelio era tocando el violn. 17

Para esto tena que escribir algunos poemas y adaptarles la msica, la cual tocaba despus de que ellos los haban ledo. He aqu uno de esos poemas inspirado en una bella montaa llamada Boann, la cual se encuentra hacia el sur de la ciudad:
CANCIN DEL BOANN Alto y majestuoso cual coloso gigante, coronado por rocas de duro granito, yrguese altivo y sereno el magnfico Boann. Mudo testigo de crueles batallas, guarda para s memorables recuerdos de heroicas hazaas, que de un pueblo forjaron su libertad. Sustentador de vida, cual bondadoso padre, alimenta y cobija en su regazo las aves del cielo, que cantan loores a Dios. Cuando lo veo, volar quisiera hasta sus excelsas cumbres, y desde all extasiado contemplar de cerca, al lmpido cielo y el infinito mar.

Despus de haberles tocado la msica para este poema, les mostraba pasajes de la Biblia en rabe que describan algunos de los milagros del Seor Jess. Tras leer cada pasaje bblico tocaba la msica que haba escrito para dichas porciones. Empezaba con el nacimiento del Seor Jess (Is 9.6; Lc 1.26-35), luego la transfiguracin (Mt 9.1-9), despus cuando calm la tempestad (Lc 8.22-25), luego llegaba al punto culminante con la muerte y resurreccin (Jn 19.16-18; 20.19-29). Esta 18

era la parte ms difcil, porque ellos aceptan los milagros del Seor Jess pero no su muerte y resurreccin. Las reacciones por parte de ellos eran diversas: unos eran completamente indiferentes, otros se incomodaban, pero otros escuchaban con atencin y era por stos por quienes orbamos y ayunbamos. En muchas ocasiones eran ellos quienes abordaban el tema espiritual, oportunidad que aprovechbamos para compartirles nuestra fe. Muchos se maravillaban cuando les decamos que en nuestro pas haba libertad de culto, y que no exista una religin impuesta que todos deban practicar. Pudimos observar que la mayora de ellos se cambian el nombre y adoptan uno ficticio. La mayora menta diciendo: Te lo juro!. La puntualidad y el sentido de la responsabilidad parecen no tener cabida en muchos de ellos. Tienen una facilidad extraordinaria para aprender idiomas y es muy frecuente encontrarse con personas sencillas que hablan dos o tres, adems del rabe. Esto se debe en parte a que en su idioma hay ms fonemas que en el espaol o en el ingls. Nos hacan muchas preguntas, algunas de ellas impertinentes, como por ejemplo: Cunto ganas?. Tu mujer, es la primera que tienes?. Por qu viniste aqu si tu pas est tan lejos?. Cunto tiempo piensas estar aqu y dnde irs despus?. Y otras ms. Tenamos que pedir mucha paciencia y sabidura a Dios para comprenderles y congeniar. Nos dimos cuenta de que ellos no hacen distincin entre evanglicos, catlicos, testigos de Jehov, o mormones. Aunque se les explique la diferencia de doctrina que existe entre estos grupos, para ellos todos son cristianos. Por eso les tenamos que aclarar que nosotros ramos mesijis, que en su idioma significa: seguidor del Mesas. La estrategia que usaba mi esposa con las mujeres era a travs de clases gratuitas de costura y espaol. Ella tambin tiene cierto 19

conocimiento de medicina natural, y esto le ayud a hacer amigas para luego compartirles del evangelio. Con los que hacan profesin de fe nos reunamos en grupos alternos de nos ms de tres a la vez, cambiando da y hora para evitar sospechas entre los vecinos. Otras veces me reuna con tres o cuatro de ellos en cafeteras para comentar en voz baja alguna enseanza bblica e incluso orar suavemente con los ojos abiertos.

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2 El islam tradicional
C A P T U L O

o popular

Supersticiones y costumbres

el norte de frica, al relacionarnos con la gente nos pudimos dar cuenta de que todo cuanto les sucede lo atribuyen a fuerzas espirituales malignas. Esta actitud corroboraba nuestra idea de que el islam tradicional (o popular) no es sino la prctica de una religin animista primitiva. Observamos que la vida cotidiana se desarrolla dentro de una cultura que mezcla ritos, prcticas paganas preislmicas, supersticiones y valores islmicos. Por ejemplo, si se abre un paraguas dentro de la casa, se tiene la creencia de que un miembro de la familia morir muy pronto. Si se abre varias veces un par de tijeras sin cortar nada, significa que habr pleitos y discusiones en casa. Los cuadros colgados en la pared deben estar perfectamente alineados y a la misma altura, de otra manera, dicen que sobrevienen muchas calamidades. Cuando se saludan dos personas lo 21

URANTE NUESTRA ESTADA en

hacen siempre en plural: Paz a vosotros, pues dicen que cada persona tiene dos ngeles: uno a la derecha, que escribe las cosas buenas, y otro a la izquierda que escribe las cosas malas. As que cuando alguien est en el servicio sanitario, nadie le debe hablar porque los dos ngeles se han quedado fuera. Tienen la conviccin de que slo podrn entrar al cielo quienes tengan ms cosas buenas que malas. En otras palabras, la salvacin es por buenas obras. Tambin dicen que toda persona al morir y ser sepultada es enfrentada con un ngel, quien le pide que diga el credo musulmn, y si no lo dice, recibe una gran paliza. Es por esta razn que las ltimas palabras que susurran al odo a un recin fallecido son precisamente las de su credo: No hay dios sino Al y Mahoma es su profeta. Estas mismas palabras son las que pronuncian a un recin nacido. Al enterrar a sus difuntos los tienen que colocar de lado, con el rostro en direccin a La Meca, lugar donde naci Mahoma. Dicen tambin que una persona no muere realmente sino hasta despus de cuarenta das, tiempo durante el cual se le debe estar recordando mucho y hablando acerca de ella. Tambin tienen la costumbre de dejar miel y comida sobre la tumba de sus seres queridos. Cuando ramos invitados a comer en casas de amigos, tenamos que comer todos, tanto anfitriones como huspedes, de un mismo plato grande. Observamos que, dependiendo de la cantidad de manteles sobre la mesa, as era el nmero de platos que servan, ya que despus de cada plato retiraban el mantel de encima. No usan cubiertos. Emplean nicamente tres dedos y es admirable la destreza que tienen para cortar la carne. Recuerdo que en la primera boda a la que asist, yo no poda cortar la carne con mis tres dedos, y el que estaba a mi izquierda, quien ya haba em22

pezado a comer y a chuparse los dedos, cort una porcin y me la ofreci. Yo me la com, no sin hacer un gran esfuerzo. En el transcurso de las bodas, las mujeres permanecen completamente aisladas de los hombres y es a stos a quienes les sirven primeramente la comida, luego lo que sobra se lo dan a las mujeres. Al bailar, estas no tienen que ser vistas por los hombres, y lo hacen entre ellas mismas. Los hombres igualmente bailan entre ellos. La mayor parte de las bodas son concertadas por los padres de los contrayentes. En algunos casos los novios no llegan a conocerse hasta el da de la boda. Su ley permite a los hombres casarse dos o ms veces. Conoc un amigo guitarrista que me cont que su padre, quien tena setenta aos, haba tenido veintitrs hijos con sus tres mujeres. Cuando tena sesenta aos se cas con una joven de quince. A los dos meses, la joven le pidi el divorcio, pero l se lo neg, porque en esa cultura solamente el hombre puede pedir el divorcio. Me deca mi amigo que en algunos casos, con slo que el esposo diga a su esposa: Ests divorciada!, ella tiene que recoger sus cosas y marcharse a casa de algn familiar, donde es menospreciada y debe hacer los trabajos de sirvienta. Este amigo tambin me aseguraba que una mujer solamente puede pedir el divorcio cuando su esposo la abandona, yndose por mucho tiempo a otro pas, o si descubre que l tiene un dibujo o tatuaje en el pecho. Por otro lado, si un hombre no encuentra virgen a su mujer, le puede pedir el divorcio inmediatamente. Por eso la mujer, despus de las nupcias, tiene que guardar su pao de bodas para exhibirlo como prueba de su virginidad. En esta cultura est prohibido comer cerdo por considerarlo un animal inmundo. En cambio, no se lavan las manos antes de comer y no usan desodorante. Muchos llenan de incienso hasta el ltimo rincn de sus viviendas para ahuyentar los malos espri23

tus. Creen en la magia, tambin en santones, personas que predicen el futuro en un estado de trance como los mdiums. Algunos creen que el visitar las tumbas de estos santones, les puede curar de cualquier enfermedad. Usan talismanes para la suerte, especialmente una manito, para proteccin personal, pues aseguran que representa una de las manos de Ftima, hija de Mahoma. Tambin usan la figura de un ojo para protegerse de los malos espritus y de la envidia. En cierta ocasin a mi amigo Mehdi (de quien yo saba que tena cuatro hijos) le preguntaron cuntos hijos tena. l respondi: Cinco! Luego, estando a solas, le dije que no saba que tena un hijo ms. l explic: Tengo slo cuatro hijos, pero digo que tengo cinco, porque son cinco los dedos de Ftima que protegen a mis hijos. Al despertarse, se lavan las fosas nasales porque creen que all han estado morando los espritus mientras dorman. Al sentarse, deben tener mucho cuidado de no mostrar la suela del zapato a la otra persona al cruzar la pierna, ya que esto se considera un insulto. Creen que si les pica el pie, van a viajar. Si les pica la nariz, es porque se van a pelear con alguien. Si les pica la oreja, alguien est hablando mal de ellos. Si les pica la mano, recibirn dinero. Si se les pega una hebra de hilo es porque tendrn una reunin o alguien les visitar. Al visitarles hay que quitarse el calzado antes de entrar a la sala principal, donde generalmente tienen una alfombra grande. Asimismo, se quitan los zapatos (o babuchas) al entrar a rezar a las mezquitas. Antes de comer, viajar o empezar a hacer cualquier cosa, dicen: Bismil! (en el nombre de Al). Cuando estornudan, eructan o se les escapa un gas intestinal dicen: Aljamdulilh! (alabado sea Al). En muchos lugares, el servicio sanitario con24

siste en un agujero en piso, al lado del cual hay casi siempre un grifo, el cual utilizan para efectos del aseo, ya que no usan papel higinico. Curiosamente, tanto la posicin que adoptan como el hecho de evitar contacto con el papel, se consideran mdicamente recomendables para la salud y la higiene. Tambin llama la atencin el hecho de que se les prohba ingerir alcohol aun en los establecimientos pblicos como bares y cafeteras. Sin embargo, Mahoma, a travs del Corn, les promete riachuelos de vino en el ms all. Es por esto que ellos creen que el paraso es un lugar lleno de placeres y delicias terrenales. Muchos de ellos fuman en exceso, unos por vicio y otros porque creen que de esta manera mantienen alejados a los malos espritus. Detrs de las puertas de las casas es muy comn ver colgando una ristra de ajos, pues creen que ahuyenta toda fuerza malfica. Podemos afirmar que, a diferencia del islam ortodoxo, que cree haber encontrado en las enseanzas del Corn las respuestas a todos los problemas, los musulmanes tradicionalistas buscan constantemente una proteccin contra las fuerzas del mal que les asedian en su diario vivir, basados en experiencias animistas primitivas. Esto es mayormente evidente entre las mujeres. El musulmn tradicionalista generalmente no ha ledo el Corn, repite lo que ha escuchado de la gente, sus padres o abuelos. Su entendimiento parece estar completamente bloqueado por una fuerza que les impide razonar con sabidura e inteligencia espiritual.

Animismo preislmico
Como sabemos, el animismo es la forma de religin que venera los espritus que segn la tradicin moran en cosas animadas o inanimadas como animales, piedras, rboles, montaas, cuevas, volcanes, ros, el sol, la luna y todos los elementos usados por 25

brujos y hechiceros. Curiosamente, la media luna es usada como un smbolo de identificacin propia de la cultura islmica. A pesar de que ellos la justifican por estar regidos por el calendario lunar, nos preguntamos cul es el mensaje proclamado a travs de este smbolo celeste, usado en el animismo aun en tiempos preislmicos. Tambin nos llama poderosamente la atencin que una de las prcticas paganas que tienen al visitar la Gran Mezquita, en La Meca, sea la de tocar y besar la piedra negra que se encuentra en un edificio cbico que ellos veneran, llamado La Kaaba (casa de Dios). Esta piedra de origen desconocido ya estaba en La Kaaba mucho antes que Mahoma naciera. (Por cierto, este sitio era originalmente el lugar donde se encontraba una iglesia cristiana.) La otra pregunta que surge es si ellos veneran esta piedra como un objeto en s, o lo hacen como rindiendo culto o adoracin a un espritu all oculto. En ese mismo lugar donde se encuentra La Kaaba tambin hay una fuente de agua salobre, de la cual ellos beben y a la cual le atribuyen poderes sobrenaturales. Hacen muchos ritos o ceremonias con el fin de controlar a los espritus malignos, ya sea para causar mal al vecino, a sus enemigos o para invocar bendiciones sobre quienes ellos quieran. Una de las formas de maleficio ms conocidas es el mal de ojo. El que logra adquirir esta clase de poder maligno lo hace motivado por la venganza o la envidia, o simplemente por daar a otros. En mi pas existe este mal en una forma ms sencilla. A los nios se les coloca un pequeo collar de cuentas rojas alrededor de la mueca. Dicen que esto lo hacen para desviar la excesiva fuerza de poder visual de algunas personas, la cual podra daar la salud del beb al mirarle directamente a los ojos. Los animistas creen tambin en la existencia de espritus que moran a orillas de lagos y ros. Me cont un amigo que en las 26

afueras de una ciudad al norte de Marruecos haba una piscina de formacin natural muy visitada por mujeres solteras, quienes al dejar una prenda personal de vestir en dicho lugar, contraan matrimonio muy pronto. Adems de amuletos, el incienso es otro de los elementos que usan en sus casas para ahuyentar a los malos espritus. Todas estas prcticas propias del animismo preislmico han llegado a formar parte de la vida diaria de muchos musulmanes tradicionalistas. Personalmente, puedo decir que de todos los musulmanes que he conocido, un noventa por ciento pertenece a esta categora.

La Gran Fiesta
El Aid-el-Kibir forma parte de la tradicin musulmana y consiste en una fiesta anual en la cual cada familia mata un cordero. La mayora de ellos realmente desconoce el significado y origen de esta celebracin, aunque debemos reconocer que entre ellos hay algunos que alcanzan a discernir que la sangre derramada por un cordero es smbolo de vida y poder contra el mal. Prueba de esto es el cordero que matan siempre que van a bautizar a un nio. El padre pone su mano sobre la cabeza del cordero, pronuncia el nombre que recibir su hijo, e inmediatamente degella al animalito con la confianza que aquel sacrificio guardar la vida del nio. El Aid-el-Kibir se remonta hasta los tiempos del patriarca Abraham. El pasaje bblico de Gnesis 22 nos relata cmo un da l recibi la orden de Dios de sacrificar a su hijo Isaac, a quien tanto amaba. Al da siguiente, Abraham llev a su hijo a la montaa para sacrificarlo. Isaac, cargando la madera sobre sus hombros, lleg con su padre al lugar indicado por Dios. Abraham hizo un altar sobre el cual coloc la madera y encima de ella a Isaac. Cuando Abraham alz su mano con el cuchillo para sacri27

ficar a su hijo, oy la voz del ngel del Seor, quien le detuvo al comprobar su obediencia. Enseguida apareci un carnero entre los arbustos, el cual sustituy a Isaac para el sacrificio. Ellos insisten en que no fue Isaac, sino Ismael quien iba a ser sacrificado. Para aclararles esa duda debemos hacerles saber que a estas alturas Ismael ya se haba marchado con su madre Agar, haca unos aos, para vivir en el desierto (Gn 21.14). Lo importante de este relato es que el carnero que salv la vida de Isaac al tomar su lugar, es de quien ellos hacen memoria y lo festejan con gran alborozo. Debemos explicarles que este pasaje bblico constituye un hermoso cuadro del sacrificio que el Seor Jess luego hara por nosotros en el monte Calvario. Pidamos al Espritu Santo que abra sus ojos espirituales para que comprendan que Isaac es aqu un tipo de Cristo. De la misma manera que l carg la madera sobre sus hombros, Cristo cargara el madero en el cual sera crucificado ms de mil aos despus. Tenemos que hacerles comprender que el mundo est destinado por su obstinada rebelin contra Dios, a un inminente colapso espiritual. Al igual que Isaac caminaba ignorando el lugar de muerte al que se diriga, as el hombre marcha a su propia destruccin total, pero de igual manera que el carnero apareci para salvar la vida de Isaac, as ha aparecido el Cordero de Dios para tomar nuestro lugar y salvarnos de la muerte espiritual. Abraham detuvo su mano y no sacrific a su hijo. Dios Padre no detuvo su mano y sacrific a su Hijo unignito por amor a la humanidad. Vale la pena hacer un alto y pensar detenidamente en lo doloroso que fue para el Padre la crucifixin de su Hijo unignito. No hay duda de que el Padre sufri tanto como el Hijo. Tomando en cuenta la importancia que tiene para ellos la sangre de un cordero, debemos aprovechar esa intuicin para explicarles que, efectivamente, la vida se encuentra en la sangre tal como nos lo 28

asegura la Palabra de Dios en Levtico 17.11: Porque la vida de la carne en la sangre est, y yo os la he dado para hacer expiacin sobre el altar por vuestras almas; y la misma sangre har expiacin de la persona. Tambin Hebreos 9.22 nos dice: Y casi todo es purificado, segn la ley, con sangre; y sin derramamiento de sangre no se hace remisin. En ese mismo libro, en 10.12 y 19 leemos: Cristo, habiendo ofrecido una vez para siempre un solo sacrificio por los pecados, se ha sentado a la diestra de Dios; por lo tanto, tenemos libertad para entrar en el Lugar Santsimo por la sangre de Jesucristo.

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3 Orgenes de la raza rabe

C A P T U L O

Promesa de Dios a Abraham

Abraham, por medio de Isaac, y los rabes tambin, pero a travs de Ismael. Ellos sealan que no es Isaac sino Ismael el primognito de Abraham, por lo tanto son ellos los herederos de la promesa y las bendiciones hechas por Dios al patriarca. A fin de aclarar esta situacin, es necesario remontarnos a los tiempos bblicos del Gnesis para analizar las evidencias histricas y poder llegar as a conclusiones claras y vlidas. Como veremos, despus de un enfoque bblico quedarn expuestas las races de la raza rabe, as como las dramticas circunstancias que causaron la gran rivalidad existente hasta hoy en da entre musulmanes y judos. Cabe mencionar el hecho de que ser rabe no necesariamente significa ser musulmn, porque hay algunos rabes que no son musulmanes. En nuestro breve anlisis bblico comenzaremos con Gnesis 11. 29-30, que nos dice: Y tomaron Abram y Nacor para s mu31

OMO SABEMOS, los judos son descendientes directos de

jeres; el nombre de la mujer de Abram era Sarai [...] mas Sarai era estril y no tena hijo. Como recordaremos, en aquellos tiempos una mujer estril se consideraba una mujer intil, y era una vergenza para su familia. En 12.2 vemos cmo Dios promete a Abraham hacer de su descendencia una gran nacin: Y har de ti una nacin grande, te bendecir y engrandecer tu nombre y sers bendicin.

El error de tres personajes

Despus de ms de diez aos de aquella promesa, Sara, cuya edad era de setenta y seis aos, al ver que no tena descendencia con Abraham, se preocup en gran manera. Queriendo ayudar a Dios, pidi a Abraham que tuviera un hijo con su sierva egipcia Agar, para que la promesa se cumpliera. De acuerdo con la tradicin, cuando una mujer reciba en sus piernas el hijo recin nacido de otra, se consideraba su nueva madre. Abraham accedi a la proposicin de su esposa. Luego, en 16.3-4 leemos que cuando vio que haba concebido, miraba con desprecio a su seora. Sarai empez entonces a maltratar verbalmente a Agar hasta llegar a pedir a Abraham que la despidiera. Finalmente lo hizo ella misma con el consentimiento de su esposo. Agar huy desesperada y vagaba sin esperanza por el desierto llorando su desventura, pero Dios escuch su angustiado gemir. El ngel de Jehov la encontr junto a una fuente de agua, la consol y le dijo que regresara y se pusiera sumisa ante su seora, lo cual ella hizo. Como podemos percibir, era a travs de estos acontecimientos de amargura y afliccin que se gestaba un nio en el vientre de Agar. Este nio nacera en medio de circunstancias muy conflictivas, desagradables y violentas, como el resultado de la voluntad del hombre, pero no de Dios. Vemos aqu un drama muy trgico en el cual todos los prota32

gonistas ponen su cuota de inmadurez espiritual. Primeramente Sara, por haber perdido toda su confianza en la promesa que Dios haba hecho a Abraham, y por haber querido ayudar a Dios al dar a su sierva Agar a su esposo para ver descendencia. Luego Abraham, por no haber consultado con Dios acerca de la proposicin que le hiciera su esposa; y por ltimo, Agar por haber menospreciado a su seora al ver que haba concebido un nio, cuyo padre era Abraham, esposo legtimo de Sara.

La compasin de Dios
Lo que llama poderosamente la atencin en este conflicto es el hecho de que Dios no castiga a todos estos personajes sino que les trata con mucha paciencia y misericordia. Dios le dio nombre al hijo de Agar antes que ste naciera: He aqu que has concebido y dars a luz un hijo, y llamars su nombre Ismael, porque Jehov ha odo tu afliccin (v. 1). En hebreo, Ismael significa: Dios escucha, realmente una gran verdad porque todo aquel que clama a Dios, obtiene de l misericordia. El Seor tambin profetiz acerca de Ismael diciendo: l ser hombre fiero, su mano ser contra todos, y la mano de todos contra l, y delante de todos sus hermanos habitar (v. 12). Ismael creci al lado de su padre y cuando cumpli trece aos, Dios apareci a Abraham y le dio el pacto de la circuncisin. Ese mismo da Abraham e Ismael se circuncidaron. Aunque el Corn ni siquiera hace alusin a la circuncisin, es curioso notar que los musulmanes se circuncidan, probablemente como una tradicin recordando este acontecimiento, y a la vez declarando su descendencia de Abraham a travs de Ismael. Lstima grande que no saben que la verdadera circuncisin es la del corazn, no la de la carne hecha a mano. Solamente Jesucristo, el Mesas, puede hacer este milagro. Tan slo l con su sa33

crificio sustitutorio en la cruz puede darnos un nuevo corazn, y hacer de toda raza humana, una sola familia. Las promesas de Dios son infalibles y se cumplen en el tiempo por l establecido. Cuando Abraham tena cien aos y Sara noventa, Dios dijo a Abraham:
Ciertamente Sara tu mujer te dar a luz un hijo, y llamars su nombre Isaac; y confirmar mi pacto con l como pacto perpetuo para sus descendientes despus de l. Y en cuanto a Ismael tambin te he odo; he aqu que le bendecir, y le har fructificar y multiplicar mucho en gran manera; y har de l una gran nacin. Mas yo establecer mi pacto con Isaac, el que Sara te dar a luz por este tiempo el ao que viene (17.19-21). Y Sara concibi y dio a Abraham un hijo en su vejez, en el tiempo que Dios le haba dicho (21.2).

Seguramente, a raz de este ltimo acontecimiento las malas relaciones entre Sara y Agar recrudecieron. Las esperanzas de Agar de que Ismael, por ser el hijo primognito de Abraham sera su heredero, se esfumaron al reconocer que Isaac era el hijo legtimo de Abraham y que ella no era su esposa legtima, sino una esclava egipcia. Este sentir de incertidumbre y frustracin fue sin duda asimilado por Ismael, quien empez a demostrar odio hacia Isaac: Y vio Sara que el hijo de Agar la egipcia, el cual sta le haba dado a luz a Abraham, se burlaba de su hijo Isaac (21.4). Sara, molesta por estas burlas, pidi nuevamente a Abraham que despidiera a Agar. Esto pareci grave a Abraham, por estar de por medio su hijo Ismael. No obstante, Dios dijo a Abraham:
No te parezca grave a causa del muchacho y de tu sierva; en todo lo que te dijere Sara, oye su voz, porque en Issac te ser llamada descendencia. Y tambin del hijo de la sierva har una nacin, porque es tu descendiente. Entonces Abraham se levant muy de maana, tom pan y un odre de agua, y lo dio a Agar, ponindolo sobre su hombro, y

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le entreg al muchacho, y la despidi. Y ella sali y anduvo errante por el desierto de Beerseba (21.12-14).

Luego, errando Agar con su hijo por el desierto, les falt agua para saciar su sed y estaban a punto de morir cuando Dios les rescat nuevamente al mostrar a Agar una fuente de agua para saciar su sed y la de Ismael (21.15-19). A partir de este momento, ellos ya no tuvieron ninguna relacin familiar con Abraham y Sara, pues vivieron en el desierto. Sin embargo, Dios que es siempre fiel, no se apart de ellos sino que les sigui mostrando su misericordia.
Y Dios estaba con el muchacho; y creci; y habit en el desierto, y fue tirador de arco. Y habit en el desierto de Parn y su madre le tom mujer de la tierra de Egipto (21.21).

Sin desestimar la bendicin para Ismael, las Santas Escrituras nos declaran quin es el autntico heredero universal de Abraham:
Y Abraham dio cuanto tena a Isaac. Pero a los hijos de sus concubinas dio Abraham dones, y los envi lejos de Isaac su hijo; mientras l viva, hacia el oriente, a la tierra oriental (25.5-6).

Al final de esta dramtica historia nos damos cuenta que Dios siempre estuvo al lado de cada personaje, tratando con ellos a fin de ayudarles a solventar de la mejor manera, cada situacin. Podemos apreciar claramente tambin, que Dios siempre ha visto con ojos de compasin y misericordia a la descendencia de Ismael, de quien proceden los rabes.

Ismael, padre de los rabes

Aunque hay indicios, no sabemos a ciencia cierta si Mahoma (570-632 d.C.) fue descendiente directo de Ismael; lo que s podemos afirmar es que los rabes, en particular, y los musulmanes, 35

en general, se ven como descendientes de Ismael. No obstante, lo importante es verlos como Dios los ve. En ningn momento debemos verles como enemigos sino como almas que necesitan ser salvas por el poder y gracia del Seor Jess. Debemos comprender que ellos son el resultado de un medio ambiente de tradiciones y mitos. Son vidas que han sido moldeadas por las enseanzas de un libro atribuido a Mahoma, de quien solamente Dios sabe si las palabras que all se encuentran salieron realmente de los labios de ese hombre. Esto un da lo sabremos, cuando estemos ante la presencia del Todopoderoso. Mientras tanto nosotros, los que hemos sido redimidos por la sangre del Cordero de Dios, tenemos la responsabilidad de comunicarles las buenas nuevas de salvacin, mostrndoles amor y conducindolos a los pies de Jess, Seor y Salvador de toda raza, pueblo y lengua.

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C A P T U L O

El islam

Los pilares
A PALABRA RABE islam, significa sumisin a Dios, y naci de las enseanzas del Corn. De igual manera, musulmn es aquel que practica el islam y que est sometido a Mahoma y sus enseanzas, ya que ste es el autor del Corn. Para algunos, el islam es considerado como una fortaleza impenetrable debido a la dureza de corazn de los musulmanes. Los pilares del islam son:

> La confesin de su fe (shajda). > La limosna (zakat). > La oracin (salat). > El ayuno (sum o ramadn). > La peregrinacin (haj). > La guerra santa (yihad), omitido algunas veces.

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La confesin de fe
Confesar pblicamente su credo: No hay ms dios que Al, y Mahoma es su profeta es suficiente para convertirse en un musulmn. Es parte importante en el llamado que hace al almudano para que acuda la gente a la mezquita a rezar. l comienza diciendo:
Alah el kabar! Dios es el ms grande! (2 veces). Confieso que no hay ms dios que Al y Mahoma es su profeta! Vengan a rezar! (2 veces). Vengan para tener xito! (2 veces). Alah el kabar! (2 veces).

La oracin
Los perodos para orar son cinco: 1) al amanecer, 2) al medioda, 3) por la tarde, 4) al ocultarse el sol, y 5) por la noche. Antes de rezar deben lavarse el cuerpo, principalmente cara, pies y brazos. Si no hay agua pueden utilizar arena, y si no hay arena les basta colocar las manos sobre la pared y luego frotarlas sobre su cuerpo. Las oraciones consisten en frases que deben decirse en rabe, adoptando ciertas posiciones del cuerpo y manos, como la de un esclavo frente a su amo, postrndose y levantndose muchas veces. Su rostro debe dirigirse hacia La Meca. Dicen: En el nombre de Al, el bondadoso, el misericordioso. Toda alabanza pertenece a Al, seor de los mundos. Dios es grande. Gloria a Dios el dueo del mundo. Luego siguen otras frmulas ms. Usan un rosario de treinta y tres cuentas para pronunciar los noventa y nueve atributos de Dios. Cada cuenta representa tres atributos; dicen que Dios tiene cien atributos, pero el ltimo es un enigma que nadie conoce. En ciertos momentos de la oracin se detienen y voltean su cabeza a la derecha, y luego a la izquierda, para saludar a los dos ngeles que dicen les acompaan. 38

La mayora de los musulmanes son nominales, en otras palabras, no practicantes, y es muy raro encontrar a alguien que cumpla con esta imposicin de rezar cinco veces al da. Ellos se lavan antes de rezar porque quieren estar limpios ante Dios, pero el problema es que por muy limpios que estn exteriormente, jams van a poder lavar su corazn. Solamente Cristo, el Mesas, puede limpiar el corazn del hombre con su sangre vertida en la cruz. Tienen que saber que l es el nico que ha venido del cielo, por lo tanto, es el nico que tiene sangre divina y slo la sangre divina nos puede limpiar todos nuestros pecados.

La limosna
El islam considera la limosna como una prctica fundamental para lograr la salvacin. Le confiere aun mayor importancia que a la oracin y al ayuno. Tiene dos categoras de limosnas, las que son totalmente voluntarias y las obligatorias. Los musulmanes creen que en cierto modo es un prstamo a Dios que luego l pagar con creces. Dicen que la oracin les lleva hasta la mitad del camino hacia Dios, el ayuno les lleva hasta la puerta de su palacio, y las limosnas les permiten la entrada ante su trono.

El ayuno
El Ramadn consiste en la prctica anual de casi un mes de ayuno forzoso, impuesto a todo musulmn. El calendario que usan es lunar y no solar (once das ms corto), consecuentemente celebran el Ramadn en diferente fecha cada ao. Como es sabido, los pases musulmanes tienen una diferencia de ms de quinientos aos con respecto a nuestro calendario. Nuestro ao 2000 fue para ellos el ao 1420. En realidad, este ayuno no es sino un cambio de horario de sus comidas, porque desayunan a las seis de la tarde, almuerzan a medianoche, y cenan entre las cuatro y las seis 39

de la madrugada. Este supuesto ayuno parece ser ms bien un culto al sol, porque lo comienzan tan pronto se puede distinguir un hilo blanco de uno negro, y lo rompen en cuanto ya no es posible distinguir los colores. Usan un instructivo con la hora precisa para saber diariamente cundo empezar el ayuno y cundo suspenderlo. En algunas ciudades pequeas usan la salva de un can para avisar a todos que ya pueden romper el ayuno. Durante el da les est prohibido comer, beber, fumar o tener relaciones sexuales, pero por las noches les est permitido todo, y muchos lo toman como una fiesta. En cuanto a sus hbitos normales de alimentacin, la mayora son muy controlados en el sentido de que no comen mucho. Un amigo musulmn me deca que el estmago debe dividirse en tres partes: la primera es para la comida, la segunda para el agua, y la tercera para el aire. Durante este mes de Ramadn procuran no tragar mucha saliva y escupen mucho, sobre todo los hombres. Adems, no deben echarse perfume ni ninguna clase de locin, pues creen que cumpliendo estas reglas se limpian de toda impureza. En cierta ocasin, durante este mes, mi esposa asisti a una reunin de mujeres. Despus de unos instantes ellas se dispusieron a rezar, pero antes de hacerlo la lder del grupo fue oliendo las axilas de cada mujer, para constatar que nadie se haba echado locin. Creen que el abstenerse de todo esto durante el Ramadn, les purifica de todos sus pecados, pero paradjicamente en este mes es cuando ms pleitos, accidentes y peleas se registran. Dicen que originalmente el ayuno del Ramadn tena que hacerse por ocho meses, pero Mahoma le pidi a Dios que lo rebajara a siete y Dios accedi. Luego le fue pidiendo progresivamente que lo rebajara ms y ms hasta llegar a un mes. Evidentemente, se trata 40

de una imitacin de la intercesin de Abraham antes de la destruccin de Sodoma (Gn 18.23-33). Muchos aseguran que el Ramadn, adems de ser guardado para purificarse, es el mes en que le fue dado el Corn a Mahoma. El ayuno les permite, dicen, comprender y tener compasin de los pobres, al experimentar el hambre que ellos sienten. Dicen que cualquiera que sea capaz de cumplir con el Ramadn, est apto para hacerle frente a cualquier problema de la vida. Es un tiempo para visitar familiares y amigos y dar limosna. Por esta razn, los mendigos proliferan extraordinariamente durante este mes. A los nios se les induce a ayunar desde que tienen trece aos. Si la persona est enferma o si la mujer tiene la menstruacin, no est obligada a hacerlo, a condicin de que lo restituya despus. Si alguien es visto comiendo o haciendo algo que est prohibido durante este mes, se expone a ser encarcelado. El mes de Ramadn era un buen tiempo para dar testimonio de nuestra fe. Era casi inevitable que nuestros amigos nos preguntaran (algunas veces casi bromeando, pues saban que ramos extranjeros) si estbamos cumpliendo el Ramadn. Les explicbamos que cuando ayunbamos, no lo hacamos en una forma impuesta o forzada, sino en una actitud completamente voluntaria y sin que nadie lo supiera, pues as lo haba enseado el Seor Jess. Adems, lo hacamos con un propsito o peticin especfica y podamos pasar hasta dos o tres das consecutivos sin comer en absoluto. Ellos se maravillaban al or esto. Les explicbamos tambin que lo hacamos en el nombre de Jess y que por eso era agradable a Dios y l nos escuchaba. Mi familia y yo ayunbamos, adems de otras ocasiones, durante el Ramadn, precisamente para interceder por ellos. Durante el mes de Ramadn las oficinas de gobierno as como 41

muchos negocios, abren sus puertas muy tarde, y algunos ni siquiera las abren. Toda actividad se realiza con mucho desgano, y cuando cometen algn error lo achacan al ayuno. El ltimo da del Ramadn lo celebran con mucho jbilo, se felicitan mutuamente y los hombres se visten de chilaba blanca (vestimenta larga hasta los tobillos), se intercambian regalos y muchos van a la mezquita a rezar. A esta fiesta le dan el nombre de Aid-l-Ftor (fiesta del desayuno).

La peregrinacin
La peregrinacin (haj), consiste en una visita a una edificacin cbica llamada La Kaaba (casa) que se encuentra en La Meca, en el centro de la Gran Mezquita y que, segn el Corn, fue construida por Abraham e Ismael (Corn 2.128). Mahoma hizo obligatorio el haj para todo musulmn por lo menos una vez en la vida, siempre y cuando dispusiera de los medios econmicos necesarios. Esta estructura ya exista mucho antes de Mahoma, y los rabes, que eran politestas en ese entonces, tenan all ms de trescientas sesenta piedras e dolos que representaban a sus dioses. Mahoma, con un ejrcito de unos diez mil hombres, hizo sacar todos esos dolos y dej solamente una gran piedra negra, que hoy en da besan y consideran como un objeto que supuestamente seala el centro de la tierra, por lo que consideran la ciudad de Medina como madre de todas las ciudades. Dentro de la mezquita hay una pequea fuente de agua salobre, de la cual ellos beben y a la cual atribuyen propiedades curativas. Dicen que esta es la fuente que salv la vida de Agar cuando erraba perdida en el desierto y estaba a punto de morir de sed. Esto es imposible, porque el desierto de Beerseba, donde err Agar, est muy lejos de all. 42

Todo musulmn que ha hecho la peregrinacin recibe el nombre de haj y debe vestir siempre de blanco por el resto de su vida. Es muy respetado y se le considera portador de una bendicin muy especial.

La guerra santa
La yihad, aunque ellos tratan de justificarlo arguyendo que lo que significa es progreso educacional y moral, en realidad lo que hace es incitar a la violencia a fin de lograr propsitos expansionistas en todas las reas posibles. Mahoma, al prescribir la lucha, convirti la guerra santa en una obligacin para los musulmanes y dijo que matar era un decreto divino. A pesar de que uno de los primeros artculos de su ley constitutiva garantiza que hay libertad de culto, y aun teniendo en cuenta que en el Corn 2.257 dice que: No cabe coaccin en religin, podemos constatar que en realidad estas declaraciones constituyen una paradoja, pues existe persecucin religiosa en casi todo pas musulmn, sustentada por la yihad. Si confrontamos dichos enunciados de paz y libertad con ciertos pasajes del Corn, nos daremos cuenta de esta gran contradiccin. Por ejemplo, en 9.5 dice:
Cuando hayan transcurrido los meses sagrados, matad a los asociadores [no musulmanes o infieles para ellos] donde quiera que los encontris. Capturadles! Sitiadles! Tendedles emboscadas por todas partes! Pero si se convierten al islam dejadles en paz, Dios es indulgente, misericordioso.

En 1989 un prominente lder poltico de Libia dijo: La expansin global del islam ha entrado en una nueva etapa; la guerra santa islmica ser ahora realizada por un comando musulmn internacional encargado de la tarea de llevar a cabo concentraciones islmicas. 43

El ayatol Rujol Jomeini tambin dijo: Exportaremos nuestra revolucin al mundo entero hasta que el grito: No hay ms dios que Al, resuene en todo el mundo! Habr lucha!. No cabe duda que el espritu expansionista y blico que inspir estas palabras, viene directamente de la vida y enseanzas de Mahoma, padre del islam. En este sentido, existe un contraste abismal entre la actitud de Cristo y la de Mahoma, porque Cristo nunca consinti la violencia. Recordemos, por ejemplo, que cuando Pedro cort la oreja de Malco, siervo del sumo sacerdote, Jess de inmediato le orden que envainara su espada dicindole: Acaso piensas que no puedo orar a mi Padre y me dara ms de doce legiones de ngeles?. El inmenso contraste consiste en que Mahoma extendi su dominio a base del poder de la espada. Cristo, el Len de la tribu de Jud, el Todopoderoso, Creador del universo, quien poda resucitar muertos, calmar la tempestad, caminar sobre el agua, sanar enfermos, sacar demonios, no us la violencia sino que escogi el camino de la cruz para ofrecer su vida en rescate por muchos. Mahoma con su espada sembr la muerte; Cristo con su muerte nos dio la vida. Napolen, el gran emperador del siglo XIX dijo:
Alejandro, Csar, Carlomagno y yo fundamos imperios, pero en qu pusimos nuestras bases? En la fuerza. Jesucristo fund su imperio sobre el amor, y millones de hombres mueren por l. Cristo demostr que era el Hijo del Eterno.

La Arabia preislmica
La historia nos dice que hasta el siglo IV la Arabia preislmica estaba habitada por una poblacin en su mayora pagana, la cual viva en contacto con judos y cristianos. Las zonas del norte y 44

central se caracterizaban por ser grandes espacios totalmente carentes de vegetacin. Sin embargo, donde haba algn manantial poda apreciarse una vegetacin, en su mayor parte de palmeras, y algunos cereales. stos eran los oasis, habitados casi siempre por una poblacin sedentaria formada en su mayora por comerciantes y agricultores. Los otros grupos tribales eran nmadas que recorran con sus rebaos los espacios desrticos entre el ro ufrates y el centro de la pennsula Arbiga. Esta Arabia seca y rida contrastaba grandemente con la zona sudoccidental de la pennsula, la cual haba desarrollado muy buenos intercambios mercantiles con Etiopa. Esta regin, cuyas costas estn baadas por las aguas del mar Rojo, gracias a la altura de sus montaas, gozaba de un clima donde florecan en los valles del Yemen, ricos cultivos de mirra e incienso. El comercio que realizaban con estos productos les haba permitido estrechar sus relaciones con algunos imperios de la India y con el mundo mediterrneo. Estos pueblos o tribus no tenan un cdigo de leyes escritas para regir su vida diaria. Parece que la ley del talin ojo por ojo, diente por diente, era la que se aplicaba para lograr la supervivencia dentro de cada tribu. La estructura social consista en clanes y familias donde cada miembro era responsable de sus propios actos. Esta ley de acero refrenaba la violencia dentro de las tribus. Sin embargo, las guerras intertribales persistan siempre sin otro propsito ms que el de arrebatar las riquezas de otros. Tanto nmadas como sedentarios veneraban al sol, la luna y las estrellas, y estaba muy extendido el culto a las piedras, en las que crean que habitaban las divinidades. Mahoma, al tener en cuenta que eran politestas, pues tenan ms de trescientos sesenta dioses, quiso unirlos por medio del monotesmo y sin duda record pasaje del Antiguo Testamento, 45

en Deuteronomio 6.4, que dice: Oye, Israel: Jehov nuestro Dios, Jehov uno es. Esto le sirvi para buscar la unidad de esos pueblos al proclamar el monotesmo, e impuso, junto con sus seguidores, la consigna de: No hay dios sino Al y Mahoma es su profeta. Por supuesto, la segunda parte fue invento de l. Por medio de la fuerza implant este lema como credo y estableci una corriente poltico-religiosa, la cual propag e impuso en muchos territorios por medio de un ejrcito que creca con muchos hombres que se iban agregando a sus fuerzas al no tener otra alternativa, ya que todo aquel que no se someta a l y a su doctrina, era muerto a espada. Si algunos de sus seguidores se converta al cristianismo o a cualquier otra religin, era eliminado. En 4.89 leemos: Si cambian de propsito [el islam] apoderaos de ellos y matadles en cualquier lugar.

Mahoma
Mahoma, reformador social, enrgico estadista, lder poltico y militar as como astuto estratega, naci en La Meca (Arabia Saud) en el ao 570 d.C. y muri en Medina en el ao 632. Su padre Abdulah muri antes de que l naciera, y su madre Amina muri cuando l tena seis aos. Al quedar hurfano fue criado por su to Abu Talib. Cuando creci lleg a ser gua de caravanas y era conocido por su extraordinaria facilidad de palabra, capaz de cautivar a cualquier audiencia. A los veinticinco aos se cas con una rica viuda de nombre Jadiya. Tuvo tres hijos: Abdulah, Alkasim e Ibrahim. Tuvo tambin cuatro hijas: Zainab, Rukayya, Um-Kulzum y Ftima. Durante sus viajes a Siria tuvo contacto directo con monjes judos y cristianos, de quienes obtuvo mucha informacin acerca de sus convicciones religiosas. Lleg a tener bastante conocimiento del Antiguo y del Nuevo Testamento. Esto queda eviden46

ciado cuando examinamos el contenido del Corn, su libro, donde encontramos mucho material potico e histrico de la Biblia, que l us en forma alterada. A la edad de cuarenta aos Mahoma empez a retirarse a una cueva del monte Hira, fuera de La Meca, para meditar. Fue all donde comenz a aparecrsele una criatura envuelta en una nube luminosa que le deca: Iqra! (lee, o recita). Estas visiones hacan sudar mucho a Mahoma, le hacan sentir como si le estrangulaban, temblaba y babeaba mucho, sus ojos estaban desorbitados y su rostro tan desfigurado al punto que tenan que cubrirlo. Senta como si le robaban el alma y ms de alguna vez lleg a pensar en arrojarse a un barranco. En este aterrador estado de ahogo y violencia escuchaba ruidos de cadenas como si se arrastraran, as como el batir de alas de pjaros. Qu haba visto Mahoma? A un ngel de Dios o a Satans disfrazado de ngel de luz? Al hacernos esta pregunta vienen a nuestra mente las palabras del apstol Pablo: Y no es maravilla, porque el mismo Satans se disfraza de ngel de luz (2 Co 11.14). Tambin llaman poderosamente la atencin los horribles efectos que estas visiones produjeron en Mahoma, los cuales son propios de un poseso y que jams han sido experimentados por profeta alguno. El nico caso en que un escogido de Dios sufri desvaros fue el rey Sal, porque un espritu maligno se haba apoderado de l (1 S 18.10-11). Un encuentro con un ngel enviado por Dios siempre ha sido una hermosa experiencia. Por otro lado, el encuentro con un emisario de Satans siempre tiene que ser algo espantoso, desagradable, horroroso. Los enemigos de Mahoma lo acusaron de hechicero y poseso. Mahoma se preocup mucho, pues lleg a pensar que efectivamente haba sido posedo por un espritu maligno. Le comparti 47

este temor a su esposa Jadiya y al primo de sta, Warakah, quien saba mucho acerca del cristianismo y quien insisti en que l estaba recibiendo revelacin de Dios a travs del ngel Gabriel. Despus de tres aos de recibir estas revelaciones empez su predicacin pblica, autoproclamndose apstol de Dios. Primeramente dijo ser un profeta rabe para su raza (14.4). Luego asegur ser un enviado para todos los pueblos (25.1). Despus proclam ser el sello de los profetas (33. 40). Mahoma tuvo once esposas y dos concubinas. Se cas con la esposa de su hijo adoptivo con la justificacin de eliminar de esta forma la divisin y las distinciones entre las clases sociales de los rabes (33.38). La vida de Mahoma parece ser para los musulmanes ms importante aun que la del patriarca Abraham. Esto queda de manifiesto cuando nos damos cuenta de que el calendario musulmn empieza no con Abraham sino desde que Mahoma tom el poder poltico y militar de Medina. Podemos entonces decir, apoyndonos en estos hechos histricos, que Mahoma fue el primer musulmn. Los musulmanes consideran a Mahoma como un santo profeta; sin embargo, l no fue infalible. Uno de sus errores ms lamentables fue el de maldecir a todo aquel que creyera que Jess era el Hijo de Dios. En 9.30 expresa: Los cristianos dicen: "El ungido es el Hijo de Dios". Eso es lo que dicen de palabra. Remedan lo que ya antes haban dicho los infieles. Que Dios les maldiga! Cmo pueden ser tan desviados!. Con esta declaracin, Mahoma hizo creer que lo que afirmaban los cristianos, era que Dios se haba casado para tener un Hijo. Mahoma jams acept que Dios pudiera humillarse a s mismo, tomar forma humana y derramar su sangre para remisin de nuestros pecados, y aunque admite que Dios dio a Jess de su 48

Santo Espritu y que naci en forma sobrenatural, paradjicamente niega que Jess haya salido de Dios. Ante esta contradiccin de Mahoma tenemos que sealar el hecho de que todo hijo hereda la sangre de su padre, y si Mahoma y todos sus seguidores aceptan que Jess naci en forma milagrosa, que fue el nico entre todos los profetas que recibi el Espritu Santo, que hizo los ms portentosos milagros, que fue un nio santo (atributo que ellos no dan a nadie ms), que reconocen que tena el poder para resucitar muertos, que dicen que poda dar vida a pjaros hechos de arcilla y an afirman que habl desde la cuna, si aceptan que naci de una virgen excepcional entre todas las mujeres, entonces, de quin era la sangre que corra por sus venas? Quin era su Padre? Las evidencias son ms que abrumadoras y la respuesta totalmente indiscutible: su Padre es el Dios vivo! Por otra parte, los musulmanes, en su gran esfuerzo por realzar la importancia de Mahoma como el ltimo enviado de Dios, afirman que han habido por lo menos ciento veinticuatro mil profetas desde Adn hasta Mahoma, y que a cada uno les fue dado un libro, pero todos se perdieron y slo se conservaron la Tor (ley juda dada a Moiss), el Zabur (dado a David), el Evangelio (dado a Jess) y el Corn (dado a Mahoma). Afirman que los judos alteraron los tres primeros y que fue por eso que Dios hizo descender el Corn, para poner todo en orden. Curiosamente, a travs de ciertos pasajes del Corn nos damos cuenta de que inicialmente Mahoma era amigo de los judos y cristianos, pero al fracasar en su intento de convencerlos de que l era un apstol de Dios, se volvi su enemigo y orden a sus seguidores rechazarles. Tanto se enfureci, que mat a algunos de ellos y vendi a sus mujeres y nios a la esclavitud. Desde enton49

ces orden que ya no se orara con el rostro en direccin a Jerusaln sino hacia la Meca. Cuando Mahoma tena unos sesenta aos ya dispona de un ejrcito como de diez mil hombres. Luego de autoproclamarse el sello de los profetas, afirm categricamente que despus de l ya no habra ms de ellos. Muri bajo misteriosas circunstancias, y se ha llegado a considerar la posibilidad de que haya muerto envenenado por una de sus mujeres, que era juda, y a quien l haba matado a su esposo e hijos. Su tumba se encuentra en Medina y es venerada por todos los musulmanes.

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C A P T U L O

5 El Corn

Su origen

ORN SIGNIFICA recitacin o lectura en alta voz. Fue es-

crito muchos aos despus de la Biblia. Est dividido en 114 suras o captulos y en 6.226 versculos o aleyas. Carece completamente de orden cronolgico, constituye la coleccin de los dichos de Mahoma y es la base fundamental del islam. Le fue revelado supuestamente por un ngel a lo largo de treinta aos, en fragmentos que carecan de un orden lgico y un plan definido, deficiencia que los tratadistas musulmanes justifican como resultado de la intuicin de Dios. El Corn fue transmitido oralmente a travs de varias generaciones; algunas porciones fueron escritas en pieles de animales, piedras, cortezas de rboles o huesos de animales, aunque no hay evidencia arqueolgica de su autenticidad. Haba hombres que se especializaban en la memorizacin del Corn (hafuz) pero fueron muertos en la batalla de Yamama. Luego hubo varios intentos por recopilar todos los dichos de Mahoma consultando a gente del pueblo. Esta tarea la realizaron 51

los tres primeros califas despus de la muerte de Mahoma. Ellos fueron, Abu Bkar, quien gobern entre los aos 632 y 634; Omar, entre 634 y 644; y Uthman, desde 644 hasta 656. El gran dilema fue que en esta poca no se usaban vocales en la escritura rabe, todo se escriba exclusivamente con consonantes, lo cual dio origen a diferentes formas de leerlo e interpretarlo. Finalmente, despus de quemar algunas versiones por considerarlas inexactas, apareci (casi ciento cincuenta aos despus de la muerte de Mahoma) la versin definitiva adoptada hasta hoy en da, la del califa Al. Al examinar cuidadosamente el Corn, nos damos cuenta de que Mahoma jams habl con Dios, porque la voz que l escuchaba jams se identific como Jehov, o como el Yo Soy, o el Prncipe de los ejrcitos, o el Santo de Israel. l nunca dijo en el Corn: Porque as dice (o ha dicho) Jehov, Redentor de Israel o Yo Jehov; este es mi nombre. En realidad, el Corn es un monlogo que Mahoma desarroll en un estado de total absorcin, inspirado por no sabemos qu clase de espritu. Asimismo, queda de manifiesto que nunca habl con el ngel Gabriel porque tampoco ste se identific como tal. Los musulmanes sostienen que el Corn es la ltima revelacin de Dios; curiosamente eso mismo dicen de su religin los mormones, los testigos de Jehov, los Hare-Krishna y otros. Con respecto a la estructura del Corn podemos afirmar que con excepcin de la primera sura, conocida como La apertura, considerada por ellos como madre de los dems captulos, los siguientes ciento trece aparecen en forma piramidal, es decir, la ms larga al principio y las dems van progresivamente hacindose ms cortas que las dems. Cada captulo tiene un nombre, relacionado con hechos o circunstancias muy especiales. Por ejemplo, el dos, La vaca, descri52

be el momento en el que segn el Corn, Moiss orden a los israelitas sacrificar una vaca con caractersticas que Dios les iba revelando poco a poco. Cada captulo empieza con las palabras: Bismilah rajmani rajm (en el nombre de Dios, el clemente, el misericordioso). Uno de sus temas principales es el del da del Juicio y el de la venganza de Al sobre los que no le obedezcan a l y a Mahoma. El espritu que prevalece en el Corn es el del anticristo, de la violencia, del ansia de poder, venganza y amenaza. La tctica de este libro es la imitacin de lo bueno para ocultar sus errores. Prueba de esto es el material potico e histrico bblico que Mahoma us en forma modificada. Procede de igual manera que el adversario: mezcla la verdad con la mentira para logar sus propsitos torcidos. Se debe tener cuidado al buscar las citas cornicas, pues no siempre se encuentran en el lugar exacto. Por ejemplo, el pasaje que dice que Dios le dio a Jess de su Santo Espritu, en las versiones de algunos coranes se encuentra en 2.88, en otros en 2.87, y aun en otros en 2.81. Asimismo, las traducciones del rabe a otros idiomas son bastante inexactas. Las narraciones que encontramos muchas veces no ofrecen sino una pobre imitacin del majestuoso relato bblico, especialmente en temas relacionados con la vida de personajes como Adn, No, Abraham, el Seor Jess y otros. El Corn no habla de los orgenes de los cielos y la tierra, solamente dice que la creacin fue hecha en seis perodos (algo que ya haba sido dicho en la Biblia). Tampoco menciona la creacin de la luz, ni la del hombre, aunque afirma que el Seor Jess fue creado al igual que Adn, del polvo. Basta leer unas cuantas pginas para darnos cuenta de que presenta a un Dios amenazador, vengativo, legalista y carente de amor. Por cierto, la palabra 53

amor, no se encuentra en este libro, ni mucho menos expresiones que manifiesten el amor de Dios. En l nunca encontraremos algo parecido a Juan 3.16: Porque de tal manera am Dios al mundo. En todo caso el Dios del Corn ama a los musulmanes, pero odia a quienes no lo son. El verdadero Dios nos am y nos recibi tal como ramos, sin distincin de raza, cultura ni lengua.

El ritmo
En cuanto al ritmo interno de las palabras en el Corn, se ha dicho con toda razn que este es un elemento que juega un papel preponderante. Esto es obvio debido a la fuerza hipntica siempre presente en la mltiple variedad de patrones rtmicos, los cuales van desde combinaciones adormecedoras hasta crescendos estrepitosos que alcanzan fieros y electrizantes efectos. Es a base de estos elementos, as como del uso de palabras persuasivas, cmo el Corn ha creado un velo espiritual tan grueso en los corazones y en las mentes de los musulmanes. Curiosamente, ellos lo han divinizado a tal punto que creen que es un libro que se encontraba escrito en tablas de oro junto al trono de Dios y fue bajado por un ngel, quien se lo ley a Mahoma. Aseguran que fue escrito con el rabe ms puro, incluyendo palabras desconocidas que slo existen en el cielo. Sin embargo, especialistas en lingstica han descubierto que tales palabras provienen del snscrito, el caldeo, el sirio y el etope. Entre los temas favoritos de Mahoma en el Corn est el da del Juicio. Su idea de la salvacin (probablemente tomada del hinduismo) consiste en una balanza para pesar las obras de cada persona. El que tenga ms obras buenas que malas lograr su salvacin, mas si por el contrario, se encuentra falto de buenas obras, ser condenado. Mahoma no se dio cuenta de que al establecer esta clase de 54

juicio se condenaba a s mismo, porque si hacemos un balance de lo que l dijo e hizo, difcilmente podemos encontrar obras realmente buenas; por el contrario, son muchas sus obras censurables. Por ejemplo, junto con su ejrcito derram mucha sangre, esclaviz a muchos judos y cristianos, canoniz la violencia a travs de la yihad, maldijo a judos y cristianos, tuvo once mujeres y dos concubinas, le quit la mujer a su hijo adoptivo, quiso suplantar a Jesucristo hacindolo un simple profeta, se autoproclam sello de los profetas, asoci su nombre con el de Dios, neg la deidad, crucifixin y resurreccin de Jesucristo y muchas faltas ms que sera extenso enumerar. En contraposicin a todo este cmulo de hechos negativos, recordemos algunas de las obras que hizo Jess. l san toda clase de dolencias, cur muchos leprosos, hizo caminar a paralticos, resucit muertos, sac demonios, hizo or a sordos, aliment a multitudes, calm la tempestad, anunci el evangelio del amor y el perdn, hizo ver a ciegos, perdon pecados, dio su vida por nosotros, venci a Satans, el pecado y la muerte y resucit al tercer da para darnos la vida eterna. Esta no es una lista exhaustiva porque hay tambin otras muchas cosas que hizo Jess, las cuales si se escribieran una por una, pienso que ni aun en el mundo cabran los libros que se habran de escribir (Jn 21.25). En ningn momento se est insinuando una comparacin entre Jess y Mahoma, porque como bien dijo alguien, eso sera como comparar la refulgente luz del sol con una vela encendida.

Qu dice el Corn acerca de Jess?

El Corn acepta que Jess naci de un milagro muy especial de Dios, pero que no vino del cielo sino que al igual que Adn, fue hecho del polvo. En otras palabras, niega la deidad de Cristo. Admite todos los milagros de Jess, pero dice que todo lo que 55

hizo fue porque Dios se lo permiti. Un musulmn nunca va aceptar que Jess haya perdonado pecados, sencillamente porque el Corn jams lo menciona. Mahoma, a travs del Corn, puso palabras en la boca de Dios y de Jess. Dice que Jess aun siendo nio habl desde la cuna diciendo: Yo soy un siervo de Al. El me ha dado el libro [evangelio] y me ha hecho profeta; me ha prescrito la oracin y la limosna mientras viva. Y la paz fue conmigo el da en que nac y la paz seguir conmigo el da en que muera, y el da en que sea devuelto a la vida (19.31-34). Tres cosas importantes deben sealarse en esta porcin cornica. Primero, la palabra rabe que usa el Corn para paz realmente significa bendito, por lo tanto, Jess es bendito, atributo que el Corn no le concede a nadie ms. Segundo, acepta que Jess naci para morir, y tercero, admite que Jess un da tena que resucitar. Tambin es interesante notar en el Corn que el pecado imperdonable (shirk) consiste en asociar a cualquier mortal con Dios. Por lo tanto rechazan la idea de que Jess vino de Dios. Sin embargo, Mahoma asoci su propio nombre con el de Dios, cometiendo as dicho pecado, porque si ponemos mucha atencin podremos notar que vez tras vez l trata de vincular su nombre con el de Dios: Creed pues en Dios y en su Enviado, el profeta de los gentiles, que cree en Dios y en sus palabras! Y seguidle! Quiz as seis bien dirigidos (7.158). D: Si amis a Dios Seguidme! Dios os amar y os perdonar vuestros pecados. Dios es indulgente, misericordioso. D: Obedeced a Dios y al Enviado (3.31-32). En otras palabras, no importa cuntos pecados se hayan cometido, ellos quedarn perdonados con el solo hecho de seguir a Mahoma. El Corn admite los milagros del Seor Jess, pero los musulmanes dicen que si los hizo fue porque tena fe, y si hubiera tenido un poquito ms, hubiera aun podido volar por los aires. Otros 56

dicen que todo lo que hizo fue porque Dios se lo permiti, de otra manera no los hubiera podido hacer. El Corn tambin afirma que el Seor Jess vendr por segunda vez, juzgar a la humanidad, despus luchar a favor del islam, se casar, tendr hijos y luego morir. Insisten en que Jess no puede ser Dios mismo, porque a Dios nadie le puede quitar la vida. Tenemos que explicarles que, efectivamente, a Dios nadie puede quitarle la vida, y que por esa razn el Seor Jess dijo:
Por eso me ama el Padre, porque yo pongo mi vida, para volverla a tomar. Nadie me la quita, sino que yo de m mismo la pongo. Tengo poder para ponerla, y tengo poder para volverla a tomar. Este mandamiento recib de mi Padre (Jn 10.17-18.).

Ignoran que su resurreccin, as como todo lo relacionado con su nacimiento, vida y crucifixin ya haba sido profetizado cientos de aos antes de que l naciera. l mismo tambin profetiz su muerte y resurreccin a sus discpulos en varias ocasiones (Mt 16.21; 17.23; 20.19; 27.63; Mr 8.31; 9.31; 10;34; Lc 9.22; 18.33; 24.7).

Concepto cornico del cielo y del infierno

Mientras que la Palabra de Dios nos dice que en el cielo habr adoracin y alabanza a Dios por siempre, el Corn en cambio describe el cielo con jardines de delicia, ros de vino, lechos de oro y piedras preciosas. Los que all se encuentren sern servidos con copas de agua viva, con frutas que ellos escogern, con la carne de ave que ms les guste. Tambin habr doncellas de grandes ojos negros como recompensa de sus obras (56.10-12; 15.24; 47.16). Aqu podemos ver la mente sensual y carnal de Mahoma: l ciertamente tuvo muchas mujeres en la tierra, consecuentemente se imaginaba que el que entrara al cielo tambin tendra un harn con mucha comida y bebida. Habla tambin del 57

infierno, y lo hace con descripciones repugnantes: A los infieles no musulmanes, les espera el infierno de fuego donde se les dar a beber una mezcla de pus y sangre. La muerte vendr a ellos por todas partes sin que lleguen a morir (14.16-17).

El gozo y la alabanza en el Corn

El gozo y la alabanza, tan fundamentales para la salud espiritual, estn completamente ausentes en este libro. Es por eso que los musulmanes no tienen la menor idea de lo que es la verdadera alabanza a Dios. Esto queda de manifiesto en sus reuniones en las mezquitas, donde no se alaba verdaderamente a Dios sino que todo es una larga repeticin de frases. El lder (imn) lee con una cantinela improvisada, porciones del Corn sin acompaamiento alguno, ya que en las mezquitas est prohibido el uso de instrumentos musicales.

La msica rabe
Esto nos conduce a considerar la msica rabe en general, ntima expresin de una raza que se caracteriza por un sentimiento sumamente nostlgico. En las canciones lentas se advierte un llanto, un lamento, una enorme tragedia, que ellos consciente o inconscientemente tratan de expresar. Personalmente, me siento muy conmovido cuando escucho algunas de sus canciones; ellas me ayudan a comprender el sufrimiento de sus almas prisioneras, cautivas del adversario. Advierto la profunda tristeza que embarga sus corazones aorando conocer algn da a Jess, como libertador de sus almas. No se trata de sentimentalismo, sino de una realidad latente que debemos afrontar con total responsabilidad, ya que nuestro llamamiento es precisamente el de comunicar las buenas nuevas a los abatidos, vendar a los quebrantados de corazn y presentar 58

a Jess, el nico que realmente puede abrir los ojos de los ciegos, sacar de la crcel a los presos, y de casas de prisin a los que moran en tinieblas.

Porciones oscuras del Corn

En este libro encontramos algunos errores y contradicciones. Por ejemplo, en varios pasajes dice que el Antiguo y Nuevo Testamento son palabra de Dios, pero que algunas porciones han sido alteradas. Sin embargo, en 6.35 y 116 asegura que: La palabra de Dios no puede ser alterada, confirmando el pasaje bblico de Juan 10.35 en que Jess dijo lo mismo. Al afirmar que la Biblia ha sido alterada, lo hace sin ningn fundamento, porque no dice cundo ocurrieron esas supuestas alteraciones, ni cules son esos pasajes en cuestin. Algunos musulmanes dicen que la Biblia tiene ms de cincuenta mil errores, pero no pueden con justificacin sealar ni siquiera uno, porque no los hay. En cambio, en el Corn podemos sealar errores obvios, como por ejemplo cuando Mahoma confunde a Mara, madre de Jess, con Mara la hermana de Aarn y de Moiss (19.29), con una diferencia de ms de mil aos. O cuando en 6.75 dice que el padre de Abraham se llamaba Azar, y no Tar como dice la Biblia; que las estrellas fugaces son piedras lanzadas por los ngeles para alejar a los diablos (67.6); que la luna es rectangular a pesar de su apariencia circular (36.40); que los musulmanes son los herederos de Canan (21.106), contradiciendo las promesas hechas por Dios a travs de sus profetas y, especialmente, a Jacob (Israel) en Gnesis 48.3-4:
El Dios Omnipotente me apareci en Luz en la tierra de Canan y me bendijo, y me dijo: He aqu yo te har crecer, y te multiplicar, y te pondr por estirpe de naciones; y dar esta tierra a tu descendencia despus de ti por heredad perpetua.

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En 11.35 dice que en el diluvio, uno de los hijos de No (no menciona su nombre) muri ahogado. En 11.45 dice que el arca de No repos despus del diluvio en el monte Al-yudi y no en los montes de Ararat como dice la Biblia. En 4.79 dice que: Todo lo bueno y todo lo malo procede de Dios; en otras palabras, Dios es la fuente de lo bueno y lo malo. Sin embargo, en la siguiente aleya se contradice: Todo el bien que te sucede procede de Al; y el mal que te aflige procede de ti mismo. La parte ms oscura de este libro no estriba tanto en errores como los antes mencionados, sino en el hecho de negar la deidad de Cristo, su muerte y resurreccin. Para hacer que un musulmn comprenda que la Biblia, la palabra de Dios, siempre ha permanecido pura e incorruptible, debemos hacerles saber que el Seor Jess ciertamente seal la hipocresa de los fariseos, pero jams les acus de alterar o pervertir la Palabra de Dios. Adems, deben saber que cuando Jess venci la tentacin en el desierto, lo hizo citando las Santas Escrituras al decir: Escrito est. El tambin dijo: Escudriad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de m (Jn 5.39). Si ellos insisten en que la Biblia ha sido alterada, se crean un gran problema, porque en 5.49 el ngel supuestamente declara a Mahoma: Te hemos revelado la Escritura con la verdad, en confirmacin y como custodia de lo que ya haba de la Escritura, es decir, en la Tor (Pentateuco), el Zabur (los otros libros del Antiguo Testamento) y el Inyil (Evangelio). No olvidemos que la Biblia ya exista antes del Corn, y si hubiera sido alterada, como ellos dicen, significara que el Corn confirma una falsedad, y por si fuera poco, ha fallado en su rol de guardin y protector de la Palabra de Dios; por lo tanto, tendran la responsabilidad de recopilar la autntica Biblia sin las supues60

tas alteraciones. La verdad es que Dios ha guardado su Palabra y la mantendr limpia hasta la consumacin de los siglos. En cierta ocasin, al explicar esto a un amigo musulmn le pregunt: Qu pasara si el rey de un pas diera una orden y alguien quisiera alterarla? l me respondi: Creo que no podra, porque un rey da sus rdenes a personas que las protegen, adems son muy poderosos y lo que ellos dicen, eso se hace. Correcto! le dije, entonces, cmo es posible que un rey, por poderoso que sea, tenga ms poder que Dios mismo? No es acaso Dios Todopoderoso para proteger su Palabra y guardarla pura a travs de los siglos? Nada ni nadie puede alterar lo que Dios ha dicho en las santas escrituras de la Biblia, porque sus palabras son para salvacin y vida eterna. Con justa razn el Seor Jess dijo: El cielo y la tierra pasarn, mas mis palabras no pasarn (Mr 13.31). Despus de un instante, mi amigo me mir con un pequeo destello de esperanza en sus ojos. Otra clara evidencia de la incorruptibilidad de la Biblia es la compaginacin perfecta (Tor, Zabur e Inyil). Toda la enseanza del Antiguo Testamento se manifiesta con plena grandeza, precisin y ms alto significado en el Nuevo Testamento. Adems, es maravilloso ver cmo las profecas mesinicas del Antiguo Testamento se cumplieron fielmente en la persona del Seor Jess en los evangelios.

Los jadiz
Jadiz significa tradicin, y constituye el material que segn el 61

decir de la gente, no le fue dictado por el ngel a Mahoma, sino que fueron dichos y hechos de ste que se difundieron entre el pueblo. Algunos de ellos fueron inventados por eruditos musulmanes, quienes despus de recopilar todos los dems dichos y relatos, escogieron aquellos que les parecieron autnticos de Mahoma. Los jadiz eran cerca de medio milln, de los cuales el califa Bukhari oficializ solamente siete mil, que son los que se leen actualmente. Estos jadiz, junto con las enseanzas del Corn, llegaron a establecer las bases para la promulgacin de las leyes islmicas que regiran en todo momento la vida familiar, social, poltica, cultural y religiosa de cada musulmn. He aqu uno de esos jadiz: Mahoma marchaba junto con su ejrcito. Estaban hambrientos y cansados y no tenan qu comer. De pronto vieron una cabra flaca y muy desnutrida; acto seguido Mahoma orden que ordearan la cabra. Sus guerreros le dijeron que esa cabra estaba muy dbil y que sera imposible obtener ni siquiera un poco de leche. Mahoma insisti y ellos obedecieron, y para sorpresa de todos, pudieron obtener leche para alimentar a todo el ejrcito. (Obviamente, este relato es una imitacin de la alimentacin de los cinco mil, hecha por el Seor Jess.) En otra ocasin, marchaban por un camino muy escarpado, estaban sedientos y les faltaba el agua. A punto de morir de sed, de pronto empez a salir agua de los dedos de Mahoma y as saci la sed de todos sus guerreros. Otro jadiz que se encuentra en el tomo 4.516 dice que Mahoma se lavaba la nariz inmediatamente despus de levantarse de dormir, porque deca que ah haba estado Satans durante toda la noche. Tambin en el jadiz 546, del mismo tomo, Mahoma dijo que el ngel Gabriel le haba revelado el secreto que determinaba lo que haca que un nio se pareciera al padre o a la madre. Deca 62

que si el hombre al tener relaciones sexuales era el primero en llegar al orgasmo el nio se parecera a l. Pero si por el contrario era la mujer, entonces el nio se parecera a ella. Mahoma, segn otro jadiz, dijo que si alguien se duerme durante los rezos en las mezquitas, es porque Satans se est orinando en sus odos (jadiz 245, tomo 2). Segn los jadiz 86 y 812 del tomo 1, rezar con el aliento con olor a ajo o cebolla, o dejar escapar un gas intestinal, es un insulto a Al, por lo que ste no les oir durante sus abluciones. Otros jadiz que suenan repugnantes son los 891 y 187, tomos 3 y 1, que dicen que una de las prcticas de Mahoma era la de escupir en las manos de sus seguidores ms cercanos para que luego ellos se las frotaran sobre sus caras o brazos, pues lo consideraban una bendicin. Asimismo, despus que Mahoma se lavaba, sus seguidores se disputaban el privilegio de obtener un poco del agua sucia para echrsela en el cuerpo o bebrsela.

Influencia cornica en la vida diaria

Una de las enseanzas equivocadas del Corn es la poligamia. Mahoma la ense con su propia vida y ejemplo. Para justificar esta prctica, algunos amigos musulmanes me decan que podan tener hasta cuatro mujeres a la vez, porque en tiempos de Mahoma muchas mujeres perdan a sus maridos despus de las guerras y se prostituan. Para evitar esto, muchos hombres tomaban para s varias mujeres como esposas. Les explicaba que durante los tiempos bblicos tambin hubo muchas guerras; sin embargo, Dios nunca aprob la poligamia. Si bien es cierto que en la Biblia aparecen grandes personajes como Abraham, Elcana, Salomn y otros que tuvieron varias mujeres, no fue porque Dios estuviera necesariamente de acuerdo con la poligamia sino porque ellos erraron al hacer eso. Re63

cordemos adems que cuando Dios cre a Adn, no le dio varias mujeres sino una sola. La poligamia, como prctica legal en los pases islmicos, ha causado problemas a los hogares y a la sociedad musulmana en general. Evidentemente, la influencia del Corn en la sociedad de los pueblos musulmanes abarca todo aspecto de la vida diaria. Los nios, quienes desde temprana edad tienen que memorizar largos pasajes del Corn, crecen dentro de una cultura saturada de ritos, con races en prcticas paganas pre-islmicas, creencias y valores islmicos en cada aspecto de su diario vivir. Los textos cornicos deben recitarse en todo acontecimiento importante como nacimientos, bodas, entierros, al inicio y final de toda emisin de radio y televisin. De tal manera que el nio llega a la adolescencia con una firme idea del islam, y cuando escucha acerca de las buenas nuevas, es algo que retie en sus odos y que rechaza inmediatamente. Realmente, se les ha formado un grueso muro de ignorancia espiritual que les impide ver la luz de Cristo. Solamente el poder del Espritu Santo puede tocar sus corazones y hacerles comprender quin es realmente Cristo Jess: el Salvador universal de las almas. El Corn les ensea que el Seor Jess es un profeta ms, que no muri, no resucit y que no es el Hijo de Dios. Dice que cuando lo iban a crucificar, Dios al ver que queran hacer dao a uno de sus profetas, lo elev al cielo, envi a alguien que se pareca a l y fue a ste a quien crucificaron. El apstol Pablo dice que si Cristo no muri ni resucit, vana es nuestra fe, no tenemos esperanza; en otras palabras, no hay cristianismo. El diablo lo sabe bien, y por eso ha inventado esta mentira. Por otro lado, los musulmanes ahmadas, que constituyen otra rama del islam, sostienen que efectivamente Cristo fue crucificado, pero que fue bajado moribundo de la cruz, le curaron 64

las heridas y cuando san se fue con su madre a Cachemira (India) donde muri a la edad de ciento veinte aos. Aun hay otros que dicen que el Seor Jess ciertamente fue crucificado, muri, luego le sepultaron y lo que realmente ascendi al cielo fue su espritu. El Corn dice que Dios no tiene ni padre ni madre ni hermanos ni hijo, l no permite que nadie comparta su trono. Dios, dice el Corn, no tiene asociados. Afirma tambin que no es posible que Jess sea el Hijo de Dios porque Dios es espritu y no puede casarse con una mujer para tener un hijo. Los que as creen, dicen, cometen una gravsima blasfemia. Aun despus de explicarles que Dios no se cas con mujer alguna porque Dios es espritu, y que fue el poder del Espritu Santo quien desde el cielo hizo que una mujer santa y virgen concibiera, ellos insisten en que Dios no puede de ninguna manera tener hijo porque: l no ha sido engendrado ni puede engendrar. Es impropio de Dios adoptar un hijo. Gloria a l! Cuando decide algo, dice tan solo S y es (Corn 19.30). Primeramente, hay que dejar claro que Jess no fue adoptado, l es el Unignito Hijo de Dios. Segundo, esta declaracin es una paradoja, porque afirma que para Dios no hay nada imposible pero a la vez declara que Dios no puede humanarse.

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C A P T U L O

Divisiones del islam

Ramas mayores del islam

de Mahoma se desencadenaron muchas intrigas, asesinatos, y luchas por el poder y liderazgo, debido a que l no haba preparado a nadie para sucederle. Esto dio lugar al surgimiento de seis grandes ramas reconocidas dentro del islam, las cuales son las ms importantes hoy en da: adems del islam tradicional o popular, que es el ms numeroso, existen los sunnitas, los chitas, los sufes, los ahmadas y el islam negro en los Estados Unidos.
ESPUS DE LA MUERTE

Los sunnitas
Los sunnitas se caracterizan por su absoluto apego a las enseanzas cornicas, dando a la vez a Mahoma una importancia extraordinaria. El nombre de este grupo se deriva de la palabra sunna (o jadiz). Puede decirse que en cierto modo los sunnitas son el equivalente a los evanglicos dentro del cristianismo, ya que para ambos grupos la Palabra escrita es ante todo la autoridad final, 67

consecuentemente los sunnitas conocen muy bien el Corn y la mayora ha llegado a memorizar largas porciones de ese libro.

Los chitas
Si los sunnitas estn en lnea paralela con los evanglicos, en cierto modo los chitas vendran a ser como los catlicos romanos, en el sentido de que ambos grupos estn sumamente interesados por la sucesin apostlica de sus lderes gobernantes. Los chitas pretenden que el lder de la comunidad islmica mundial sea un descendiente directo de Mahoma. Por esa razn dicen que Al, quien era primo y yerno de Mahoma, era el legtimo sucesor de este ltimo y quien debera haber continuado con el liderazgo en lugar de los tres primeros califas que le sucedieron, los cuales fueron ilegtimamente elegidos. Por lo tanto, cha o chita, es todo aquel que apoya o pertenece al partido de Al y a sus sucesores directos. Curiosamente, cuando hacen el llamado a la oracin, en lugar de decir: No hay dios sino Al y Mahoma es su profeta, tal como lo dicen los sunnitas, dicen: No hay dios sino Al y Al es su profeta.

Los sufes
Sufismo es un vocablo que se deriva de la palabra rabe sof, que significa: lana. Los sufes (siglo IX y X) eran fcilmente identificados por sus vestimentas lanudas y speras, as como por su manera mstica de vivir. No estaban de acuerdo con la opulencia en que vivan sus gobernantes musulmanes. Su manera de protestar en contra de esta corrupcin consisti en rechazar las riquezas y placeres del mundo. Buscaron un contacto directo con Dios a travs de una vida monstica en escuelas de santos, donde eran enseados por lderes que les imponan frreas disciplinas. En cierto modo eran monjes musulmanes. 68

El sufismo desde entonces se ha caracterizado por la bsqueda de una experiencia interior con el decidido propsito de escapar del yo y de esta manera lograr una absorcin del ser hacia Dios, lo que demuestra el irresistible deseo de alcanzar una comunicacin real con el Creador. En su desesperado afn de lograr un contacto directo con Dios, los sufes llegaron a autoflagelarse y martirizarse. Otra forma descontrolada de rito que practicaban consista en repetir muchsimas veces el nombre de Al, o sus atributos, hasta alcanzar mediante un intenso crescendo de la voz, la inconsciencia. Se crea que este estado era propicio para comunicarse con los espritus benignos e incluso con Dios. En otras ocasiones, este estado de inconsciencia se lograba mediante el baile. Casi siempre era una mujer quien se colocaba en medio de un crculo formado por otras mujeres, se inclinaba hacia delante con los brazos en la cintura, sus piernas separadas, su largo cabello colgando hacia abajo y empezaba a balancearse de un lado a otro al comps de la msica, la cual se tornaba cada vez ms frentica hasta que la mujer alcanzaba el clmax y caa inconsciente. En este estado se supona que ella se haba despojado de s misma y haba logrado llegar a la presencia de Dios para verle cara a cara. Obviamente, en el sufismo existe un gran deseo de conocer a Dios en una forma directa y personal, lo que nos abre la puerta para explicarles que no hay necesidad de estas prcticas, y mucho menos de autoflagelarnos, porque no podemos agregar nada al sacrificio que Jess hizo en la cruz. Cristo sufri en carne propia el castigo que nosotros merecamos. Mas l herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre l, y por su llaga fuimos nosotros curados (Is 53.3-5). 69

Nosotros, los redimidos, debemos orar por ellos para que estas hermosas palabras puedan tener eco en sus corazones, y as lleguen un da a experimentar el inefable amor de Cristo en sus vidas sedientas de Dios.

Los ahmadas
El precursor de este grupo islmico fue Ghulam Ahmed Mirza, quien vivi a fines del siglo XIX. Este erudito de origen hind dio una nueva interpretacin a algunos pasajes del Corn y proclam ser un nuevo reformador, profeta e intrprete de la ley enviado por Dios como Mesas para limpiar al islam de todas sus impurezas. Asegur que en su calidad de profeta, era l y no Cristo quien vendra como juez en el da del Juicio. Al hacer esta declaracin ech por tierra las palabras de Mahoma, quien afirm que despus de l ya no habra ms profetas. Adems afirm que la yihad era estril y estaba fuera de lugar para la extensin del islam en el mundo. Sus declaraciones le granjearon la enemistad de los dems grupos islmicos, quienes declararon que los ahmadas eran una secta hereje y por lo tanto no eran verdaderos musulmanes. A pesar de esto, los ahmadas constituyen una fuerza creciente gracias a sus extensas campaas proselitistas en Asia, frica oriental, parte de Europa y actualmente Amrica Latina. Difieren en doctrina del resto de los musulmanes por creer que efectivamente Cristo fue crucificado, pero fue bajado de la cruz aun vivo, lo curaron de sus heridas y luego parti hacia Cachemira (India) donde muri a la edad de ciento veinte aos.

El islam negro
Los orgenes de este movimiento se remontan hasta el siglo XVII, cuando muchos hombres y mujeres fueron llevados como escla70

vos a Amrica del norte. Entre estas multitudes viajaron muchos musulmanes, quienes guardaron su religin y la ensearon a sus descendientes. Fue as como el islam lleg y se preserv en buena parte de Norteamrica. Su expansin se est llevando a cabo con mucha rapidez y ello se debe en gran parte al gran deseo de la gente de color de encontrar sus races, as como de establecer una identidad muy propia. Por otro lado, muchos han adoptado el islam como una forma de protesta social en contra de los abusos raciales cometidos por los blancos. Se ha podido constatar que, a Dios gracias, muchsimos de ellos han tenido en estas tierras un encuentro personal con Cristo Jess, a tal grado que se dice que en el sur de los Estados Unidos de Amrica hay ms evanglicos negros que blancos.

Los fundamentalistas
Al fundamentalismo islmico se le conoce tambin con los nombres de islam ortodoxo, islam extremista e islam radical (o integrista). Para los musulmanes fundamentalistas, el estado y la religin son una misma cosa. Religin y poltica son inseparables: no puede existir la una sin la otra. Estn convencidos de que todo, absolutamente todo incluida la poltica, debe hacerse en base a los dictados de su religin, instaurada por Mahoma a travs del Corn. Para todo musulmn fundamentalista, la guerra santa constituye la base principal de su cosmovisin. Est convencido de que es nicamente a travs de atentados sangrientos, acciones terroristas y hombres suicidas, fanticos dispuestos a morir, que lograrn implantar su ortodoxia y expandir la ley shara en todo el mundo occidental. Al igual que la mayora de los musulmanes, los fundamentalistas creen que Cristo no muri en la cruz, sino que cuando iba a 71

ser crucificado, Dios lo elev al cielo para que nadie le hiciera dao. Creen que vendr por segunda vez, luchar a favor del islam (en otras palabras, matar a todo aquel que se oponga al islam, incluyendo a nosotros los cristianos), despus juzgar al mundo, se casar y morir como cualquier otro mortal. El fundamentalista tiene un enfoque teolgico para todas las cosas que le rodean. Cree que aplicando las enseanzas del Corn tiene todos sus problemas resueltos. Incluso cree que, si el mundo entero estuviera regido por el Corn, no habra tantos conflictos ni tanta corrupcin. Los fundamentalistas conocen muy bien el Corn y han memorizado largas porciones de l. Para los musulmanes en general, pero especialmente para los fundamentalistas, sus ms acrrimos enemigos son Israel y los Estados Unidos de Amrica. Se distinguen especialmente por su espritu extremadamente blico, y por dejarse crecer la barba abundantemente.

Los conservadores
Este tipo de musulmn se caracteriza por su esfuerzo en cumplir con las bases establecidas por el Corn, pero sobre todo con los cinco perodos de oracin. Velan por el bienestar de la comunidad donde viven y cultivan la hospitalidad, aunque casi siempre lo hacen para ser reconocidos y tenidos en estima por los dems.

Los liberales
Estos son en su mayora jvenes universitarios abiertos a nuevas ideas, quienes incluso sealan los errores e injusticias de sus gobernantes y expresan su total insatisfaccin por la falta de equidad en la distribucin de las riquezas en la sociedad, pero no por eso han abandonado sus creencias religiosas. 72

Los secularizados
Estos son los que lo nico que ansan es su bienestar fsico. Han sido absorbidos por el consumismo, especialmente los que viven en el extranjero y quieren impresionar por lo que tienen. En cuanto a su religin, no creen ni dejan de creer. Tambin existen otros grupos que no son muy numerosos y que constituyen una minora. Ellos son los jeriyes, los bahais, los ismaeles, y aun hay otros ms pequeos todava no totalmente reconocidos.

El mundo de la mujer musulmana

Al observar y examinar a fondo la conducta de las familias musulmanas, nos dimos cuenta de que la mujer musulmana vive en un mundo de menosprecio e incertidumbre. Este menosprecio se debe en gran parte a la desvalorizacin que ha sufrido en su cultura durante siglos, pues siempre se ha credo que su nica funcin es la de tener hijos, criarlos, cuidarlos, hacer las tareas del hogar, permanecer encerrada entre las cuatro paredes de su casa, sumisa en todo momento y circunstancia a su marido, autoridad mxima e indiscutible en todo hogar. Es tambin vista con menosprecio cuando ha sido abandonada por su marido, o incluso cuando debido a su esterilidad no puede tener hijos. A esto hay que agregar el hecho de que casi siempre cuando la mujer es abandonada por cualquier circunstancia por su marido, tiene que irse a vivir a casa de su padre, donde es tratada como una sirvienta. La mujer musulmana tambin vive en un mundo de incertidumbre porque desconfa mucho de lo que le pueda deparar el destino, pues carece de proteccin de todo tipo, incluso cuando es maltratada por su marido. En el Corn encontramos pasajes en 73

los que se induce al hombre a maltratar a las mujeres (Corn 4.38; 38.41). Por regla general, solamente el hombre puede iniciar el divorcio. Asimismo la ley islmica establece que en un pas musulmn las mujeres deben casarse nicamente con musulmanes, excepto si un hombre, siendo extranjero, se convierte a la religin islmica, en cuyo caso l tiene que adoptar un nombre musulmn y consecuentemente todos sus hijos sern musulmanes. En el campo profesional, la mujer es considerada incapaz de desarrollar sus plenas facultades intelectuales, por lo que se la subestima y se la considera intelectualmente inferior al hombre. En el aspecto religioso los hombres estn convencidos que el Corn ha sido escrito slo para ellos, por lo tanto en los rezos deben ser excluidas las mujeres. Esto queda de manifiesto en sus reuniones en las mezquitas, donde por lo general no se ven mujeres, aunque hay algunas que s tienen un pequeo lugar apartado para ellas en la parte posterior, sin ser vistas por los hombres. La mujer musulmana no goza de confiabilidad por parte de los hombres, pues estos dicen que ellas viven con los demonios y que el infierno est lleno de ellas. Tambin aseguran que la mujer es sexualmente ms agresiva que el hombre. La mujer extranjera generalmente es considerada prostituta, especialmente si es una soltera viviendo en un pas islmico, y mayormente si es de origen norteamericano o europeo. La razn parece ser que para ellos, estos dos continentes estn completamente corrompidos con tantos robos, asesinatos, abortos, prostitucin y muchos males ms. Adems los consideran responsables de las guerras mundiales y del caos moral en que se encuentran los dems pases del mundo. La idea que tienen de los pases occidentales es la de una sociedad totalmente corrupta, crudamente representada en filmes 74

como Texas, que ellos han exhibido para que precisamente todos se den cuenta de la maldad del mundo occidental. En la shara est establecido que el testimonio de un hombre vale tres veces ms que el de una mujer. En cuanto a las herencias, el hombre tiene derecho a recibir las dos terceras partes, mientras que la mujer solamente una tercera parte. Tambin se ha visto que lo peor que le puede suceder a una soltera es quedar embarazada, porque es la mayor afrenta que puede recibir una familia, y el ms grande insulto para los hermanos de la joven. Puede que algn familiar cercano mate a la joven para restaurar el honor de la familia, y aunque sea un crimen, ser tratado con consideracin por ser una muerte por honor. Es muy raro ver a un hombre con su mujer y sus hijos caminando como familia por las calles de la ciudad. Cuando esto sucede, el hombre va adelante y la mujer con los hijos atrs. l no puede rebajarse yendo al lado de su mujer. Creo oportuno en este apartado, prescribir ciertas recomendaciones a toda mujer occidental que visita un pas islmico. Primeramente, debe cuidarse mucho en cuanto a su manera de vestir, evitando usar faldas cortas, pantalones cortos (shorts), blusas escotadas y cualquier otra prenda que ellos puedan considerar como una provocacin sexual. Tambin debe evitar andar sola, no debe llevar el pelo suelto, ni sonrer demasiado. Tampoco debe mirar a los ojos de los hombres, especialmente si son extraos, porque lo interpretan como una provocacin. Vale la pena mencionar el movimiento feminista que en los ltimos aos se ha dado en los pases musulmanes, y que aboga por los derechos de la mujer. Afortunadamente, este movimiento no ha tenido mucha oposicin de parte de los gobiernos islmicos, ya que obviamente constituyen una fuerza poltica muy representativa. 75

La occidentalizacin en los pases musulmanes es un fenmeno que se extiende cada vez ms. Esto se debe a la gran cantidad de gente que viaja a Europa y a Norteamrica y asimila la cultura occidental. Tambin los medios de difusin y comunicacin, especialmente la televisin, estn teniendo una decidida influencia en este fenmeno.

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7 La Biblia y el Corn
C A P T U L O Quin miente?
ficas que comprueban la autenticidad de las Santas Escrituras. En 1947 se realiz uno de los descubrimientos ms trascendentales en la ciencia de la arqueologa. Se trata del hallazgo de los rollos del Mar Muerto, que contenan manuscritos bblicos, los cuales fueron encontrados por unos jvenes beduinos en las cuevas de Qumrn, en el valle del Jordn al sudeste de Jerusaln. Las condiciones climatolgicas fueron muy propicias para la conservacin de estos pergaminos, ya que la aridez del terreno y el sitio en que se encontraban (cuatrocientos metros bajo el nivel del mar) ayudaron a retardar el deterioro de tan importantes documentos. A pesar de estas grandes ventajas para su conservacin, fue necesario el uso de computadoras y mtodos cientficos sofisticados para la restauracin y reconstruccin de todos los fragmentos. El texto de estos rollos estaba escrito en piel de animal en los idiomas hebreo y arameo. Despus del tratamiento 77

EBEMOS DAR GRACIAS a Dios por las evidencias cient-

cientfico de todas las piezas, qued demostrado que el contenido de esos rollos es exactamente el de nuestra Biblia actual. Este es un motivo por el cual debemos dar gracias a Dios, porque el testimonio de la ciencia viene a confirmar nuestra fe y proporciona a la vez un rayo de luz para despejar cualquier duda de aquellos que se obstinan en creer que la Biblia no es la Palabra de Dios. Adems de esta y muchas otras evidencias histricas y cientficas que corroboran la autenticidad de la Biblia, Dios, en su infinita sabidura y omnisciencia, nos dej en su Palabra un hermoso pasaje que establece la verdad. En 1 Juan 2.22-23 dice: Quin es el mentiroso, sino el que niega que Jess es el Cristo? Este es el anticristo, el que niega al Padre y al Hijo. Todo aquel que niega al Hijo tampoco tiene al Padre. El que confiesa al Hijo, tiene tambin al Padre. La Palabra de Dios nos revela categricamente la verdad, y nos corresponde a nosotros la gente del libro, como ellos nos llaman, comunicarles el verdadero amor y perdn de Dios manifestado mediante el sacrificio sustitutorio de Cristo el Mesas en la cruz.

Es Al nuestro mismo Dios bblico?

Para responder a este interrogante debemos recordar que los tres nombres primarios de la deidad son: Elohim, Jehov y Adonai. La primera, Elohim, es un nombre que expresa pluralidad dentro de la unidad y es el resultado de dos estructuras: El, que significa el que es poderoso, y Alah, que quiere decir jurar. De tal manera que El-Alah, (que da como resultado Elohim), es el poderoso que jura por s mismo. Partiendo de esta evidencia lingstica, podemos entonces razonar que la palabra Alah fue tomada por los rabes del hebreo para referirse a Dios. Sin embargo, al hacerlo ignoraron que esta78

ban reconociendo solamente una parte de Dios, omitiendo la ms importante: El (el que es poderoso). Y si bien es cierto que la palabra rabe Alah significa para los musulmanes: Dios, el Creador, el Seor de los mundos, el misericordioso, podra creerse que es nuestro mismo Dios bblico. No obstante, nuestro Elohim se despoj de su gloria, tomando cuerpo humano en la persona del Seor Jesucristo, san enfermos, resucit muertos, calm el viento y la tempestad, perdon pecados, conoci la dureza de la vida, muri, resucit, venci la muerte y a Satans, nos hizo libres del pecado, nos dio la vida eterna, ascendi al cielo y nos envi su Santo Espritu. En cambio su dios Alah, segn lo expresan ellos mismos, jams se va a humillar a bajar del cielo y hacerse como uno de nosotros, l no permite que se le asocie con nadie, Alah no conoce los sufrimientos de la vida, nunca ha vencido las tentaciones de la carne, del mundo o de las riquezas. Alah jams ha destruido en limpia batalla el poder del diablo y de la muerte, ni ha hecho sacrificio alguno para mostrar su amor al mundo, por lo tanto no sera extrao que un musulmn se dirigiera a su dios Alah en los siguientes trminos: Ah! Seor; t siempre en el cielo, con los ngeles sirvindote, alabndote. T no sabes lo duro que es estar en la tierra, no conoces el hambre, la sed, el dolor, el cansancio; ojal un da bajaras del cielo para experimentar lo que es el sufrimiento y as comprendernos mejor. Por el contrario, ningn creyente verdadero puede tener quejas contra Dios, porque precisamente nuestro Dios baj del cielo para dar su vida por nosotros, aun sabiendo que tendra que experimentar toda clase de sufrimientos. Los seguidores de Alah no conocen al Hijo de Dios, por lo tanto no pueden conocer al Padre porque: Todo aquel que niega al Hijo, tampoco tiene al Padre. 79

Los evangelistas, testigos de los hechos

Muchos musulmanes tambin me decan que los cuatro evangelios del Nuevo Testamento se contradicen porque no dicen exactamente lo mismo, palabra por palabra, y que por tanto, no se les puede dar crdito. En cambio, que la versin final del Corn fue escrita por un solo hombre y que eso le daba una gran ventaja. Para aclarar este punto, les deca que, efectivamente, Al escribi la versin definitiva del Corn, sin embargo, no debemos olvidar que antes de l, Abu Bkar, Omar y Uthman ya haban tomado parte en la seleccin de los dichos de Mahoma al consultar a la gente del pueblo. Obviamente, todo lo que se escribi en el Corn fue material de tercera o cuarta mano. Quien lo escribi finalmente no fue un testigo presencial de los hechos, sino que buena parte de ellos se lo contaron personas de la tercera o cuarta generacin despus de Mahoma, o los ley en algn lugar. Qu pasara si en una reunin de unas doce personas se sentaran todos en crculo, y uno de ellos susurrara una historia con muchos detalles al odo de la persona a su lado, y luego todos se fueran comunicando lo mismo? Cul sera la versin final de esta historia? Sin duda, algo distorsionado: pues de esta manera se recopil el Corn. En cambio en los evangelios, dos de sus cuatro autores (Mateo y Juan), vieron y oyeron al Seor Jess, luego estando distantes entre s y sin comunicacin alguna, debido a la persecucin que sufrieron, escribieron inspirados por el Espritu Santo, todo cuanto haban visto y odo. Ellos hacen el relato de todos los hechos con sus propias palabras y los dos dicen la misma verdad, especialmente lo concerniente a la crucifixin y resurreccin del Seor Jess. De tal manera que ellos fueron testigos presenciales de la gloria de Cristo. Marcos y Lucas escribieron lo que con diligencia investigaron y adems se lo narraron los que desde el 80

principio lo vieron con sus propios ojos. Por lo tanto, qu es ms contundente? El relato final hecho por un hombre que no vio ni oy nada de lo que escribi o el testimonio de varios testigos oculares de los hechos reales, cuyos relatos se apoyan, complementan y confirman entre s? Obviamente, la evidencia es ms que contundente. Debemos tambin considerar que los autores de los cuatro evangelios enfatizan diferentes aspectos de la persona del Seor Jess. Mateo, por ejemplo, cuando escribi su evangelio, tuvo como propsito mostrar que Jess vino como rey, para cumplir las profecas judas del Antiguo Testamento, y enfatiza lo que Jess dijo. Marcos, muestra el carcter de Cristo como siervo incansable de Dios y del hombre, y enfatiza lo que Jess hizo. Lucas, quien fue mdico, escribi en su evangelio la ms amplia biografa de Cristo: cerca de la mitad del material de este libro no se encuentra en los otros tres evangelios. Presenta a Jess como hombre perfecto y humano. El cuarto evangelio, el de Juan apstol, presenta a Cristo como Hijo de Dios, como Salvador y como Dios, consecuentemente es uno de los libros ms profundos y espirituales. Lo admirable de los evangelios es que los cuatro se complementan entre s, porque en cada uno encontramos material e informacin que no se encuentra en los otros, formando as un cuadro sinptico completo de la vida del Seor Jess.

Es Mahoma el salvador del mundo?

Los musulmanes, adems de otorgarle atributos casi divinos a Mahoma, dicen que es el salvador del mundo. Pero el Corn mismo les desmiente, porque l jams dijo serlo, ms bien afirm: Yo no soy ms que un amonestador (Corn 67.27). En otras palabras, o soy ms que un simple mortal. Adems, Mahoma es un pecador que necesita pedir perdn 81

por sus pecados. En 47.19 el ngel le dice a Mahoma: Sabe pues, que no hay Dios distinto a Al, pide perdn por tus faltas y pecados y por los hombres y mujeres creyentes. Para que Al corra un velo por sus faltas pasadas y futuras. A pesar de haber sido un hombre pecador que deba haber pedido perdn, tuvo la osada de proclamar que era el sello de los profetas. A todas luces, un gran error, porque el Seor Jess dijo en Mateo 11.13 que todos los profetas y la ley profetizaron hasta Juan [el Bautista]. De tal manera que despus de Juan ya no hubo necesidad de ms profetas porque Cristo, el autntico Salvador del mundo, con su muerte y resurreccin vino a consumar la obra redentora de Dios. Precisamente, cuando estaba en la cruz, exclam: Consumado es!. Debemos considerar adems, que Mahoma no reuna los requisitos bblicos necesarios para ser considerado un autntico apstol de Dios, porque todo verdadero profeta de Dios deba reunir ciertas cualidades:
> Tena que haber nacido de la raza proftica, en otras palabras deba ser israelita. > Deba hablar en nombre de Jehov (Yahv). > Sus mensajes deban confirmar las anteriores revelaciones.

Mahoma no slo no fue israelita, sino que los odiaba hasta la muerte. Nunca reconoci a Jehov como Dios, por lo tanto, jams siquiera mencion su nombre, y el nombre de su Dios aun se desconoce. Su mensaje central siempre estuvo en oposicin al de la Biblia, especialmente en cuanto al origen divino de Cristo, su muerte y resurreccin. Tambin en lo concerniente a la salvacin, la cual proclam que se obtiene nicamente por abrazar el islam y las buenas obras. Cmo es posible entonces que algunos 82

lo consideren salvador del mundo? Cmo pueden aseverar tal cosa, si Mahoma jams hizo sacrificio alguno por la humanidad? Muy al contrario, ceg la vida de multitudes. El hecho de haber nacido despus de Jesucristo y haberse autoproclamado el ltimo de los profetas, no le da derecho a ninguno de sus seguidores para suplantar el rol de Jesucristo como autntico Salvador del mundo y atribuirselo a su lder Mahoma. Jesucristo dijo: Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin, el primero y el ltimo (Ap 22.13). l es eterno, no tiene principio ni fin, l es Todopoderoso y lo demostr con sus grandes y asombrosos milagros. Cuando se les pregunta por qu Mahoma no hizo un solo milagro, algunos responden que el Corn es su gran milagro, y que har el ms grande milagro de todos los tiempos en el Da del Juicio, cuando le pida a Dios que perdone a toda la humanidad, y Dios lo har. (En ese caso comamos y bebamos, porque no importa lo que hagamos, de todas maneras seremos salvos.)

Mahoma no tena seguridad de salvacin

Cmo pudo Mahoma ser el salvador del mundo, como lo aseguran, si ni siquiera tena seguridad de su propia salvacin? En 16.61 leemos: Y si Al tuviera que castigar a los hombres por sus malas acciones, no dejara ninguna criatura viva (por supuesto, incluyendo a Mahoma.) Cuando se dan cuenta de la imperfeccin de Mahoma, se enojan y arremeten contra el Seor Jess, diciendo que l fue solamente un profeta como cualquier otro. Nosotros tenemos que hacerles ver que todos los profetas bblicos que han existido han dicho ser lo que realmente eran: mensajeros de Dios, y que jams profeta alguno dijo ser el Hijo de Dios. El Seor Jess s lo declar acerca de s mismo. l no dijo ser un profeta, ms bien afirm: 83

Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre sino por m (Jn 14.6). Tambin dijo: Padre, la hora ha llegado; glorifica a tu Hijo, para que tambin tu Hijo te glorifique a ti (Jn 17.1). Los profetas mostraban el camino hacia Dios; Jess dijo que l es el camino. No necesit escuchar a ningn ngel, porque l es la encarnacin de Dios mismo, que vino desde el cielo para salvar al mundo. Si se les pregunta a los musulmanes quin es el nico que debe ser adorado, dirn: Dios!. Respondern de igual manera si se les pregunta quin es el nico que puede dar la vida eterna y perdonar pecados. Esto nos permite plantearles: Entonces por qu el Seor Jess fue adorado desde su niez y dijo ser la resurreccin y la vida? Y por qu es el nico que perdon pecados? Todo esto muestra contundentemente que Cristo es Dios hecho hombre, y no un simple profeta. Al ver las abrumadoras pruebas sobre la legitimidad de Jess como Salvador del mundo, ellos me decan que a lo mejor en la Biblia se habla de algn futuro profeta sin mencionar su nombre y que seguramente se trata de Mahoma. Les deca que el nico que aparece sin mencionar su nombre es el falso profeta, que por cierto ser lanzado junto con la bestia en el lago de fuego (Ap 19.20). Les adverta asimismo que la Palabra de Dios dice que muchos falsos profetas han salido por el mundo y que no nos debemos dejar engaar por ellos.

Ignoran quin es el Espritu Santo

Los musulmanes no creen en el Espritu Santo. Muchos aseguran que esta es un expresin que se usa para referirse al arcngel Gabriel. Sin embargo, el Corn claramente afirma que Dios dio a Jess el Espritu Santo (2.88). Aun al tratar el tema de la Trinidad, 84

su idea es que todo cristiano tiene tres dioses: Dios, Jess y Mara. Nos consideran politestas y blasfemos, porque segn ellos adoramos a tres dioses diferentes y asociamos a Dios con seres mortales. Ignoran que la Trinidad (Padre, Hijo y Espritu Santo) no se refiere a divinidades distintas, sino a la esencia de un solo Dios Todopoderoso en tres personas. Aunque sabemos que este es un tema imposible de explicar racionalmente, se recomiendan algunas ilustraciones que podran en cierto modo ayudarles a tener una pequea idea acerca de este gran misterio. El agua, por ejemplo, es una sustancia que podemos percibir en tres estados diferentes: gaseoso, lquido y slido. En cualquiera de estos tres estados no podemos decir que se trata de un elemento ajeno al agua, porque precisamente en su esencia es eso, agua con caractersticas muy propias del estado en que se encuentra. De la misma manera, la Trinidad expresa la esencia misma de Dios revelada en los trminos de Padre, Hijo y Espritu Santo. Ante la insistencia de algunos, aseverando que Dios nunca pudo haber descendido del cielo y volverse carne, podemos precisamente tomar el ejemplo de la lluvia, y explicarles que el agua se encuentra en las alturas, invisible en las altas nubes, baja a su tiempo y cae en forma de gotas, las cuales podemos ver y sentir. De igual manera, el Altsimo Dios mora invisible en los cielos, pero un da baj y tom forma humana para derramar su sangre y darnos vida eterna. Otro ejemplo es el de alguien que tiene hijos, tiene padres y est casado; lgicamente es padre, es hijo y es esposo, pero no por esto se trata de tres personas diferentes, sino de una sola con tres expresiones distintas para cada caso. Otro es el sol, que est compuesto por una gran masa de energa nuclear de la cual emana la luz y que a su vez produce calor: elementos indispensables 85

en un solo cuerpo celeste que nos proporciona vida fsica. De igual manera, Padre, Hijo y Espritu Santo son tres manifestaciones de un solo Dios que comparten la misma esencia dadora de vida espiritual. El pasaje ms revelador acerca de la Trinidad lo tenemos en el bautismo del Seor Jess. Insisto, todos estos ejemplos no son sino ideas remotas de lo que realmente es este gran misterio de tres seres co-iguales, co-eternos, en un solo Dios. Tres personalidades con la misma naturaleza, sustancia y esencia, que forman un solo ser santo, prefecto y eterno. Llama poderosamente la atencin el hecho de que Mahoma a travs del Corn rechaza el concepto bblico de la Trinidad, pero paradjicamente l cre su propia trinidad ya que l es el padre del islam, por lo tanto, el Corn es su hijo y la shara (esclavitud a la ley), es el espritu que prevalece en el islam.

ngel de luz o de tinieblas?

El Seor Jess tuvo la gloria con su Padre aun antes que el mundo fuese, y cuando estuvo en la tierra haca lo que vea hacer al Padre. En cambio Mahoma, aparte de un sueo en el cual dijo haber hablado con Dios, nunca realmente habl con Dios ni le vio. A pesar de esto sus seguidores insisten en que a Mahoma tambin debemos creerle porque lo que dijo le fue dictado por un ngel. El apstol Pablo precisamente nos advierte de este peligro al sealar que hay ngeles de tinieblas que se visten de luz para engaar a todo aquel que les escuche. En Glatas 1.7-9, refirindose al evangelio, dijo: No que haya otro, sino que hay algunos que os perturban y quieren pervertir el evangelio de Cristo. Mas si aun nosotros, o un ngel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema. Como antes hemos dicho, tambin ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habis recibido sea anatema. Anatema 86

significa maldicin, y si los musulmanes ensean otro evangelio diferente al bblico, me da escalofros de tan slo pensar en que ellos estn creyendo en una maldicin. En algunas ocasiones cuando comparta 2 Corintios 11.14, en el cual Pablo dice: Y no es maravilla, porque el mismo Satans se disfraza como ngel de luz, algunos me preguntaban: Entonces t no crees en Mahoma? Yo les responda negativamente y les explicaba que la Palabra de Dios dice que todo espritu que no confiesa que Jesucristo (el Salvador), ha venido en carne, no es de Dios (1 Jn 4.2-3). Entonces Mahoma es del diablo? insistan ellos. Yo slo digo lo que dice la palabra de Dios. En otras ocasiones, cuando responda a preguntas difciles como sta, yo mismo aprenda, porque deca cosas que me enseaban a m mismo. Algunos se volvan mis enemigos, mas Dios me mostraba que realmente nuestro verdadero enemigo no son los musulmanes, sino Satans, quien de alguna manera los ha llevado cautivos por muchsimo tiempo bajo su voluntad. Es al diablo a quien debemos desenmascarar con sus trampas y ardides, no olvidando que vez tras vez finge sabidura, adopta apariencia de pureza y an de piedad, precisamente para engaar. Recordemos que fue a Adn y a Eva en el huerto de Edn, a quienes Satans apareci por primera vez como ngel de luz, en un entonces inofensivo y bello animal, probablemente la criatura ms hermosa en todo el Edn (la serpiente), quien fue maldita por Dios entre todos los animales y sentenciada a arrastrarse y comer polvo por haberse prestado a cumplir los propsitos de Satans. El rol de Satans y el anticristo ha sido el de negar la Palabra de Dios. Por ejemplo, Dios dijo a Adn y Eva: Si desobedecis, 87

moriris (Gn 2.17). Satans neg la Palabra diciendo: No moriris (Gn 3.4). Dios dijo a Jess: T eres mi Hijo amado: en ti tengo complacencia (Lc 3.22). Mahoma neg la Palabra diciendo: Dios no puede tener un hijo (Corn 9.30). Jess dijo: Yo soy el primero y el ltimo; y el que vivo, y estuve muerto; mas he aqu que vivo por los siglos de los siglos (Ap 1.17-18). El Corn lo neg al decir que no muri ni resucit (4.156). El Espritu Santo, morando en Jess, public libertad a los cautivos, y a los presos apertura de crcel (Is 61.1). La ley musulmana (shara), el espritu del islam y del anticristo, public la esclavitud al Corn y a Mahoma (Corn 10.38). En el principio Satans us una serpiente para engaar y causar la cada espiritual de la raza humana. Luego us un libro para envenenar el corazn de un sinnmero de almas. Debemos dar gracias a Dios porque l envi a su Hijo precisamente para deshacer las obras del diablo y para darnos vida en abundancia (Jn 10.10). Los musulmanes tienen que saber que esta clase de vida est al alcance de todo aquel que se arrepiente de sus pecados y acepta al Seor Jesucristo como su salvador personal. As tambin recibe la vida eterna, porque l dijo: Yo soy la resurreccin y la vida; el que cree en m, aunque est muerto, vivir (Jn 11.25). Esta es una santa promesa que por siglos ha permanecido ignorada por los hijos de Ismael, por quienes debemos orar intensamente para que un da Cristo ilumine sus corazones y puedan as experimentar el amor y el perdn de Dios.

Forzando la verdad por una mentira

En la Palabra de Dios podemos ver cmo Dios envi a Juan el Bautista para preparar el camino del Seor Jess. Los musulmanes, al querer imitar algo parecido para el advenimiento de 88

Mahoma, buscaron desesperadamente alguna declaracin bblica para hacer creer que la venida de Mahoma fue profetizada por el Seor Jess. Leyeron minuciosamente la Biblia con el nico propsito de forzar a toda costa algn pasaje que pudiera dar tal idea, y encontraron Juan 14.16, donde Jess dice: Y yo rogar al Padre y os dar otro consolador, para que est con vosotros para siempre: el espritu de verdad [parkletos] al cual el mundo no le puede recibir porque no le ve ni le conoce; pero vosotros le conocis porque mora con vosotros, y estar en vosotros. De este pasaje ellos han tomado la palabra griega parkletos, que significa: alguien que intercede por otro ayudndole en sus debilidades, es decir, el Espritu Santo. Los musulmanes han acusado a los cristianos de haber alterado las vocales, insistiendo en que la palabra originalmente empleada era periklyts, que significa: el alabado. Da la casualidad que en rabe, la palabra Mohamed (Mahoma) significa precisamente: el alabado, por lo que aseguran que al usar la palabra correcta en dicho pasaje bblico (periklyts, en vez de parkletos) queda de manifiesto que el pasaje se refiere a Mahoma y no al Espritu de verdad. Los telogos griegos han explicado a los musulmanes que la palabra periklyts no ha sido en absoluto usada en la Biblia como un atributo del Espritu Santo; sin embargo, ellos acusan a los cristianos de haber alterado dicha palabra. Aun hacindoles tomar conciencia de que Mahoma jams podra cumplir con las funciones del Espritu Santo, y que adems ni siguiera reuna las cualidades de un profeta del Antiguo ni del Nuevo Testamento, no hay manera de cambiar su manera obstinada de pensar. Debemos pedir precisamente al Espritu Santo que quite el velo de ignorancia que ha enceguecido los ojos espirituales de nuestros amigos, y que un da puedan ver la luz admirable de 89

Cristo Jess, Seor y Dios de todos los pueblos y confines de la tierra, quien vino al mundo para ofrecer su vida en expiacin por los pecados de la humanidad.

Usemos su verdad para guiarlos a la Verdad

Debemos aprovechar algunos pasajes del Corn que pueden servir como puentes para conducir a nuestros amigos al conocimiento de la Verdad. Por ejemplo, en dicho libro cada profeta recibe un nombre distintivo: a Abraham se lo llama el amigo de Dios; a Moiss, el portavoz de Dios; a Mahoma, el alabado. Pero en la sura 2, aleya 88 claramente dice que a Jess (Asa), le fue dado el Espritu de Dios. Por lo tanto, vale la pena preguntarnos: qu es ms relevante? Ser el amigo de Dios, el portavoz de Dios, el alabado entre la gente o el propio Espritu de Dios? En esto s tiene razn el Corn y ratifica lo que el Seor Jess mismo dijo en Juan 10.30: Yo y el Padre uno somos. Tambin en 4.172 el Corn afirma que Jess es la Palabra de Dios, y tiene razn, porque los profetas han sido mensajeros o portadores de la Palabra de Dios, pero ni uno de ellos dijo ser la Palabra encarnada de Dios. Esta declaracin del Corn confirma el pasaje de Juan 1.1: En el principio era el Verbo [la Palabra] y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. Si los musulmanes confiesan que la Palabra de Dios es eterna, y si el Corn declara que Jess es la Palabra de Dios, lgicamente estn declarando la eternidad de Jess. Precisamente l dijo: Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin, el primero y el ltimo (Ap 22.13). Adems, todos estamos de acuerdo en que las palabras que decimos forman parte inseparable de nuestro ser. Aun antes de concebirlas en nuestro cerebro, ya han nacido en nuestro corazn, porque las palabras que salen de nuestra boca constituyen la 90

expresin ms completa y reveladora de nuestro ser. De la misma manera, Jess es la Palabra viva de Dios, l es Dios humanado, hablndonos no a travs de profetas ni de ngeles sino en una forma directa y personal. Afortunadamente este concepto de la palabra es muy bien asimilado en la cultura islmica, ya que creen que lo que hablamos, lo que sale de nuestra boca, es nuestro hijo. El Corn tambin dice que Jess desde muy pequeo formaba pjaros de arcilla, luego soplaba en ellos y les insuflaba vida. Esto nos ayuda para que ellos puedan comprender quin realmente es el Seor Jess, porque aun el Corn reconoce el poder creador de Jess, pero tienen que entender que no solamente cre pjaros, sino que l es el Creador de la tierra, los cielos y todo lo que en ellos hay. Testis unus, testis nullus (testimonio nico, testimonio nulo). En la jurisprudencia se establece que para comprobar la veracidad de un hecho es necesario el testimonio de dos o ms testigos. Por lo tanto, el testimonio de una sola persona no es suficiente para establecer en justicia la verdad de los hechos. Mahoma declar por s mismo que l era un profeta enviado por Dios, y an ms, que l era el sello de los dems profetas. Ante estas aseveraciones debemos considerar:
> Que Mahoma nunca hizo un solo milagro para comprobar lo que l dijo ser. > Nadie dio testimonio de l. > Tampoco nadie vio ni oy al ngel que supuestamente hablaba con l.

Ante esta falta de pruebas nos preguntamos cul es la evidencia que da testimonio de las palabras y presunciones de Mahoma. Algunos dirn que el Corn es la evidencia de lo que l dijo ser, pero eso no es cierto porque el material que l emple no fue 91

nada nuevo, sino una parte es de la Biblia, que por cierto alter a su manera y conveniencia. El material original bblico que l modific y emple en el Corn le fue transmitido en forma oral por judos y catlicos. De tal manera que no hay un autntico testimonio que sustente las declaraciones de Mahoma. Por otra parte, es realmente hermoso leer que cuando el Seor Jess fue bautizado por Juan el Bautista al inicio de su ministerio, las Santas Escrituras nos dicen que los cielos, Dios Padre y el Espritu Santo dieron testimonio del origen divino del Mesas:
Y Jess despus que fue bautizado, subi luego del agua; y he aqu los cielos le fueron abiertos y vio al Espritu de Dios que descenda como paloma, y vena sobre l. Y hubo una voz de los cielos que deca: ste es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia (Mt 3.16-17).

Todo esto fue presenciado por mucha gente que haba acudido a los bautismos de Juan. Por lo tanto, los cielos, el Espritu Santo y Dios Padre dan claro testimonio pblico acerca de lo que el Seor Jess dijo ser: el Hijo de Dios. Digna de sealar es la presencia del Espritu Santo, quien apareci en forma corporal, visible a los ojos de muchos, precisamente para dar claro testimonio del origen celestial y naturaleza divina de Jess, nuestro Salvador.

Consejos para la obra evangelizadora

> Al desarrollar nuestra labor nos dimos cuenta an ms de la gran necesidad de la uncin total del Espritu Santo para llevar a cabo con eficiencia la Gran Comisin dada por el Seor Jess en su Santa Palabra. > Es imprescindible una verdadera pasin por las almas, ayunar e interceder por ellas ante el trono de Dios. > El abec del misionero debe ser: A = amar las almas sin

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Cristo; B = buscarlas con avidez; y C = compartirles con denuedo las buenas nuevas.
> El conocimiento de la Biblia es muy importante para presentar el mensaje con claridad y conviccin y para aclarar cualquier duda o comentario equivocado de ellos. > La experiencia ministerial adquirida en la iglesia local ayuda muchsimo, aunque siempre debemos adaptarla al contexto cultural y social del lugar donde nos encontremos. > Debemos hacer esfuerzos y proponernos desarrollar vidas disciplinadas en todas las reas de nuestra existencia, de otra manera nos volvemos nuestros propios enemigos y hacemos la tarea an ms difcil. > Es aconsejable un buen conocimiento de la cultura en la cual vamos a vivir para una mejor comprensin de las personas con quienes nos vamos a relacionar. > Es necesaria la justificacin de la estancia en el pas por medio de la bivocacionalidad; en otras palabras, hay que realizar un trabajo laico a la vez que se lleva a cabo la obra misionera. > Debemos cuidarnos de no criticar su cultura, ni mucho menos a Mahoma o al Corn. Tenemos que valorar los aspectos positivos de su arquitectura, msica, artesanas, etctera, de una manera sincera, para que ellos se sientan valorados. Adems, esto nos ayudar para una mejor adaptacin a la cultura. > No nos olvidemos de tomar tiempo para nuestra esposa y nuestros hijos, para orar juntos, aconsejarles, animarles y tambin escucharles. > Puesto que tenemos que comunicarnos con la gente que

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nos rodea, debemos hacer esfuerzos por adquirir un conocimiento del idioma de la regin. En los pases musulmanes, adems del rabe, se habla el francs y numerosas otras lenguas.
> Al compartir el evangelio, debemos hacerlo uno por uno. Evangelizar a dos o ms a la vez provoca hermetismo o incluso actitudes agresivas y de rechazo. Aunque alguno de ellos est receptivo al evangelio, no lo demuestra porque teme que su compaero lo denuncie. > No olvidemos que en estos pases existen redes de espionaje muy fuertes, que inducen a que entre ellos exista una gran desconfianza. > Como medida de seguridad, conviene escribir en clave datos muy confidenciales del ministerio. > Debe pensarse en un sistema adecuado y seguro para la canalizacin de fondos. Antes de entregar documentos a las oficinas gubernamentales del pas donde se reside, se debe hacer fotocopias de ellos y guardarlos en lugares muy seguros. Todo ttulo o documento debe autenticarse antes de salir del pas de origen en el ministerio de Educacin, ministerio del Interior, ministerio de Relaciones Exteriores y embajada del pas de destino. No se deben dejar hasta el ltimo momento los trmites gubernamentales en el pas de destino, porque la burocracia es generalmente muy lenta, especialmente en el mes de Ramadn. Todo trmite debe hacerse con la mayor anticipacin posible. > No desanimarse por la falta de compromiso y seriedad por parte de las personas con quienes tratamos. Debemos comprender que ellos son el resultado de una cultura

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donde el concepto del tiempo y el sentido de la responsabilidad son muy variables. > Por ltimo, aunque no menos importante, estar dispuestos a sufrir, si el Seor as lo permite, porque est establecido que nuestro trabajo debe realizarse con sudor, lgrimas y en algunos casos, hasta con sangre.

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8 Prueba de fuego
C A P T U L O De la prueba a la victoria

tres aos en el Norte de frica, ya habamos compartido las buenas nuevas a muchos. El Seor en su gran misericordia nos permiti ver quince conversiones de fe, as como cinco bautismos, los cuales habamos hecho en la baera de la casa, en el mayor secreto posible. Todo marchaba muy bien, pero para sorpresa nuestra, el 13 de diciembre de 1994 llegaron por las tarde cuatro policas vestidos de civil a nuestra casa. Ellos me preguntaron: Dnde estn los vdeos de la pelcula Jess, las Biblias en rabe y todo el material cristiano?
ESPUS DE PERMANECER

Yo les respond: No tenemos un solo vdeo de los que usted menciona. Luego empezaron a requisar la sala principal. Despus se dirigieron a una pequea biblioteca y miraron libro por libro. Afortunadamente no vieron mi agenda personal, donde tena los bosquejos de cartas de oracin, nombres y telfonos de hermanos 97

rabes. Tampoco vieron un libro que se titulaba Cmo ganar almas, de Carlos Spurgeon, pero vieron cuatro Biblias en espaol. Por qu tienen tantas Biblias? me volvieron a preguntar. Somos cuatro en la familia y cada uno de nosotros tiene una para su estudio personal. Luego se escandalizaron al encontrar una Biblia en rabe. Les expliqu que estudiaba el rabe y que quera saber la traduccin de algunos pasajes bblicos del espaol al rabe. Ellos me dijeron que eso estaba prohibido. Me decomisaron dos Biblias, una en espaol y otra en rabe. Luego me indicaron que les acompaara. Me introdujeron en un vehculo de la polica y me llevaron a la comisara. All me esperaba el comisario, un hombre alto y delgado, quien agitando su gran dedo ndice haca m en forma amenazadora, me dijo: Tiene que decirnos qu hace usted aqu en este pas! Yo soy un profesor del Conservatorio de Msica le respond. No! Usted es un espa! me replic. No, seor, yo no soy ningn espa. Entonces usted trabaja para el ILNA! Disculpe, pero ni siquiera s el significado de esas siglas! Eso quiere decir la Iglesia Libre del Norte de frica! Yo no lo saba, es la primera vez que escucho esa palabra! Entonces usted es misionero!Esta Biblia en rabe que le encontramos en su casa lo comprueba todo, pero de nada le sirve, porque todas las Biblias han sido alteradas! Qu interesante! Cundo y por quin ha sido la Biblia alterada? 98

El comisario permaneci por un momento en silencio, luego exclam: Por los judos! Permtame mostrarle algunos pasajes por favor le dije. Luego proced a mostrarle, de la misma Biblia en rabe que ellos me haban decomisado, algunas porciones de Oseas (5.1-7) y Jeremas (6.6-8) donde dice que el pueblo de Israel ha desobedecido, se ha apartado de Dios, ha prevaricado, y le espera un castigo. Despus que l ley los pasajes que le mostraba, le dije: Si los judos han alterado la Biblia, cmo es posible que hayan dejado estas porciones que hablan tan duramente acerca de ellos? El comisario callaba. Luego empec a compartirle el plan de salvacin de Dios. Lo que me admiraba y llenaba de gozo era ver que este seor lea con mucho inters todo pasaje de la Biblia en rabe que yo le mostraba. A pesar de que continuaba diciendo que eso no era posible porque el Corn era el ltimo libro de Dios y que Jess era slo un profeta, era notorio su inters en las Escrituras. Habamos empezado a hablar aproximadamente a las seis y media de la tarde y era ya la una de la madrugada y aun continubamos conversando. El Seor me gui a mostrarle Juan 3.36, despus de lo cual me dijo que regresara a mi casa y que me presentara en la comisara a las ocho y media de ese mismo da. Antes de salir, me decomis mi pasaporte y mis dems documentos personales. Al regresar a mi casa, mi esposa estaba muy preocupada al no saber qu me haba pasado. Le compart lo que haba ocurrido y despus de orar juntos pidiendo a Dios fortaleza, ella se sinti mejor. 99

Ese mismo da regres muy temprano a la comisara. En una pequea habitacin me esperaban dos detectives. Al ser conducido ante ellos, empezaron a vociferar y sacudir las sillas contra el suelo. Me gritaron y en medio de insultos me preguntaron qu realmente estaba yo haciendo en el norte de frica. Uno de ellos me agarr fuertemente por el pecho de la camisa con la mano izquierda y con la mano derecha tom un palo con pequeos clavos y agitndolo amenazadoramente frente a mi cara, me dijo que si yo no deca la verdad me iba a golpear. Yo peda al Seor me diera sabidura y me dirigiera para poder responder, entonces lleg a mi mente el pasaje de las Escrituras, en Mateo 10.18-20, donde dice que seramos llevados an ante gobernadores y reyes, pero que no nos debamos preocupar por cmo o qu hablaramos, pues en aquella hora nos sera dado lo que debamos decir. Le respond al detective que no poda alterar las declaraciones que haba expuesto ante el comisario, porque haba dicho la verdad. l se enfureci aun ms, y lanz el palo con fuerza sobre una mesa que haba all, y sali de la habitacin profiriendo insultos y diciendo que yo era Satans. El otro detective tom el telfono y me dijo que si segua ocultando la verdad, llamara inmediatamente a la oficina central para que me llevaran a un lugar a trescientos cincuenta kilmetros de distancia de ah. Yo repet lo mismo, e inmediatamente dej caer violentamente el auricular, a la vez que me acusaba de estar recibiendo dinero lavado (obtenido por la venta de droga). Esto me molest mucho y le dije que si bien era cierto que yo estaba siendo juzgado por personas con autoridad, un da estaramos frente a Dios y l tendra que dar cuenta de sus palabras. Su actitud cambi totalmente y me dijo muy calmadamente y con cierta expresin de culpa: 100

Este es nuestro trabajo y tenemos que hacerlo as, de otra manera nuestro jefe nos despide. Luego lleg el comisario con la Biblia en rabe. Para mi sorpresa, haba estado leyendo y subrayando algunos pasajes. Me dijo que haba encontrado una porcin que corroboraba lo que l me haba dicho antes, que Jess era solamente un profeta. Me ley una parte de la introduccin al libro de Salmos que deca: Estos son los Salmos profticos de la victoria de Jess el Mesas. Le expliqu que lo de proftico se refera a los Salmos y no al Seor Jess, que el nombre atribuido al Seor Mesas, significaba Ungido, y que era el Salvador que l y su familia necesitaban para poder experimentar el amor y perdn de Dios. A medioda me permitieron ir a comer a la casa, segn las normas del arresto domiciliario que me haban impuesto. Luego tuve que regresar para continuar con el interrogatorio hasta ya muy tarde. Esa noche mi esposa y yo oramos mucho y lemos algunas de las promesas del Seor que nos aseguran su proteccin en medio de las pruebas, especialmente el Salmo 27 y 1 Pedro 3.13-20. La alabanza tambin nos sostuvo muchsimo. Qu bello fue escuchar en aquellos momentos difciles promesas tan preciosas puestas en msica como: Torre fuerte es el nombre del Seor, a l correr el justo y levantado ser, o: Tu fidelidad es grande, tu fidelidad incomparable es, nadie como t, bendito Dios, grande es tu fidelidad. La alabanza realmente llenaba nuestros corazones y nos daba mucha fortaleza. Cuando volv por la maana a la comisara, yo iba completamente renovado en el espritu. Al da siguiente ya haban detenido a dos hermanos rabes miembros del grupo que se reuna en mi casa para orar y estudiar la Biblia conmigo. Un da despus, a otro ms. A ellos les haban decomisado Biblias en rabe, casetes y alguna literatura cristia101

na. Adems del duro interrogatorio los maltrataban mucho, con insultos, y les pegaron. A estas alturas, nuestra cuenta bancaria haba sido congelada y mi esposa no poda hacer ninguna extraccin. Nuestro telfono tambin haba sido intervenido para escuchar cualquier conversacin. Estos interrogatorios se prolongaron hasta el 16 de diciembre. Esa tarde ya no pude regresar a casa; junto a dos de los creyentes marroques fuimos conducidos ante el procurador general. Me leyeron los tres cargos por los cuales se me acusaba: primero, por predicar el evangelio; segundo, por proclamar que Jess es el Hijo de Dios; y tercero, por reunirme en mi casa con varios musulmanes para leer la Biblia. A los dos hermanos marroques les acusaron de traicin a la fe islmica. Me pidieron que firmara aquella declaracin. Yo les dije que consideraba injusto nuestro encarcelamiento por esas razones, pero ellos me dijeron que si no firmbamos sera otro cargo ms que se nos agregara. Ante esas circunstancias y sin otra alternativa, tuve que firmar. Mis hermanos rabes tambin lo hicieron, e inmediatamente nos pusieron las esposas. Para m aquel momento fue de sentimientos encontrados, por un lado de gozo al ver que era por anunciar las buenas nuevas de salvacin que aquellas esposas caan sobre mis manos. Por otro lado, de gran preocupacin al darme cuenta de que me separaban de mis seres queridos y no saba qu iba a ser de ellos. Como pude, supliqu a uno de los policas que avisara a mi esposa. Le di el nmero de telfono y le agradec de antemano. Fuimos nuevamente introducidos en el vehculo de la polica junto con otros prisioneros y encerrados en una de las crceles de la prisin central. Mis Biblias, una en rabe y la otra en espaol 102

que me haban sido decomisadas, le quedaron al comisario. Me quitaron todo cuanto llevaba, incluso mi cinturn. Luego me condujeron a una pequea celda de unos pocos metros cuadrados, donde se encontraban diecisiete presos de diferentes nacionalidades: dos belgas, dos espaoles, un italiano, un portugus, un judo, y los dems, marroques. El ochenta por ciento de ellos haban sido arrestados por trfico de drogas, de tal manera que cuando entr en la celda ellos pensaron que yo tambin era contrabandista y me preguntaron con cuntos kilos de droga me haban capturado. Todos se sentaron en el suelo, formando un semicrculo a mi alrededor. Entonces les expliqu que no era por droga que me haban llevado all, sino por haber compartido mi fe con algunos amigos. Me preguntaron de qu religin era. Les dije que no tena ninguna religin, porque religiones hay muchas, pero no salvan. Expliqu que mi fe estaba basada en la muerte y resurreccin de Jess el Mesas, porque solamente su sangre puede limpiarnos de todos nuestros pecados. El jefe de los presos, muy exaltado, me dijo que en un pas musulmn decir eso estaba prohibidsimo y que haba tenido suerte de no haberme encontrado con un fundamentalista, porque seguramente me hubiera matado. Yo respond que lo que haba recibido de Dios era tan grande que no lo poda ocultar. A lo largo de la conversacin pude compartirles ms ampliamente acerca del evangelio. Las condiciones higinicas de la crcel eran muy deprimentes. El lugar era muy fro y todos dormamos en el suelo con dos mantas, una para el suelo y otra para arroparnos. El espacio para cada uno era estrictamente medido para que todos cupiramos acostados. No daban comida, solamente rodajas de tomate con un pan muy duro. A mi esposa le permitan llevarme comida nicamente dos veces por semana. Sin embargo, la fidelidad de Dios 103

se vea claramente cuando uno de los espaoles, a quien le permitan recibir comida casi todos los das de parte de una monja espaola, comparta los alimentos conmigo. Se les permita fumar y la mayora lo haca con exceso, principalmente por la noche. Me sorprendi ver que aun los gendarmes que custodiaban las celdas proporcionaban cigarrillos a los prisioneros, pero luego supe que era porque las familias dejaban en las oficinas los cigarrillos, y el gendarme les daba cuando el presidiario peda. A altas horas de la noche muchos encendan sus radios con mucho volumen y conversaban en alta voz. De tal manera que se pasaba la noche prcticamente en vela. A un lado de la celda haba un agujero separado por una rstica cortina: este era el servicio sanitario. A un lado del agujero haba un tubo metlico con un grifo en el cual tenamos que saciar la sed y lavar los cubiertos. Al tercer da, el subjefe de los carceleros (a quien yo no le caa muy bien) me dijo que el siguiente da me tocaba a m limpiar la celda. Esto era necesario hacerlo descalzo, restregando los ladrillos del fro suelo con un cepillo muy grande y jabn. Me qued sumamente sorprendido cuando un marroqu pidi tomar mi lugar y hacerlo por m. Yo se lo agradec y acced, porque de haberlo hecho seguramente hubiera pescado un resfriado. Yo estaba preso, pero la palabra del Seor jams puede estar presa, de tal manera que el Seor me permiti compartir las buenas nuevas en forma personal con la mayora de ellos. Me acerqu al subjefe de los carceleros, quien despus de haberle yo testificado, me dijo que yo era un tonto y que era mejor me quedara acurrucado en el lugar de la celda que me corresponda. El espaol que comparta su comida conmigo me dijo que a l se le haca muy difcil cambiar de vida porque tena una familia a quien daba toda clase de lujo, y que la nica forma de mantenerla 104

as, era haciendo cosas ilegales como el contrabando de drogas. El portugus me dijo que comprenda de lo que le estaba hablando, pero que para l la vida tena que tener ciertos riesgos, de otra manera no tendra sabor ni emocin. Estaba dispuesto a seguir traficando al salir de la prisin, pero lo hara con mayor cuidado. El italiano, quien cumpla una condena de doce aos, tambin por contrabando de drogas, me dijo que yo no saba nada de las cosas de Dios, que debera hablar con su madre, quien s saba mucho, porque ella era de los testigos de Jehov. Desde que llegu a la prisin me di cuenta de que el judo bromeaba y rea mucho con los musulmanes. Esto me sorprenda, pues judos y musulmanes no se llevan siempre bien, mucho menos se aceptan entre s. Despus que le compart el evangelio me dijo que l saba que Jess era Dios, pero que no poda aceptarlo en la forma que yo le deca porque l tena un corazn de piedra. Me cont que un da al regresar a su casa, vio los cuerpos destrozados de su familia debido a una bomba que haba estallado all. Desde entonces su corazn se le haba vuelto como de piedra, y si l bromeaba y rea era como un escape a su gran tristeza porque por dentro estaba llorando. Le dije que el Seor Jess haba venido para darle vida en abundancia, que l poda hacer que de su interior brotaran ros de agua viva, que l poda darle un corazn de carne. Su respuesta fue que tal vez despus le aceptara. Por la misericordia de Dios, un marroqu hizo una profesin de fe en Cristo Jess en esta prisin. Un da uno de ellos, sentado en el suelo junto a m con sus mantas rozando las mas, al orme decir que Jess era el nico que haba venido del cielo, se alter en gran manera, tom sus mantas, se apart, las sacudi violentamente como muestra de repudio y despus de insultarme dijo a gran voz que Jess no poda ser el Hijo de Dios. Tambin haba en la celda un marroqu alto y corpulento a 105

quien todos teman pues era el ms fuerte, por lo que le llamaban King-Kong. Este hombre pasaba vociferando y renegando de aquel lugar. Deca que aquello era el infierno pues las condiciones eran insoportables por el fro, falta de alimentos, carencia total de espacio aun para moverse y el mal olor del sanitario. Un da, l estaba bastante alterado y se dirigi a m reclamando: No crees que esto es el infierno? Le respond que de acuerdo al evangelio, el infierno es un lugar de fuego y tormento como no hay otro. El vocifer diciendo que no poda haber otro lugar peor que ese, luego prosigui: Y t que hablas tanto de Dios, por qu no le pides a ese Jess que te saque de aqu? Yo le respond: T lo vers. A l slo le faltaban tres semanas para completar su condena y estaba muy desesperado por salir. Los das pasaban, fui llevado varias veces a juicio, pero estos se haban frustrado porque yo no tena abogado defensor. Mi esposa no dispona del dinero para pagar los honorarios y adems ninguno quera hacerse cargo de defender a un cristiano por temor a sufrir represalias de parte del gobierno. Las visitas que me haca mi esposa eran muy frustrantes, pues se llevaban a cabo en dos pasadizos con tela metlica cada uno, ambos separados por aproximadamente metro y medio. En uno de ellos entraban unos cincuenta presos y en el de enfrente a sus familiares. En su afn por hacerse or, todos gritaban a la vez, haciendo un ruido ensordecedor, por lo que la comunicacin era prcticamente nula. La tercera vez que fui llevado a juicio, mientras esperaba con 106

los dems reos el momento para ser juzgado, mi esposa con mis dos hijas lograron acercarse al lugar. Despus que ellas rogaron al custodio permiso para verme, ste me permiti saludarlas brevemente. Aquel momento fue muy desgarrador y los cuatro nos unimos en un solo abrazo en medio de profundos sollozos. Al cabo de algunos das mi esposa, despus de mucha oracin, logr obtener los servicios del nico abogado marroqu que se arriesg a defenderme a m, as como a los dos hermanos rabes. El dinero enviado por nuestra iglesia de El Salvador a travs de la iglesia en Espaa para pagar al abogado, lo haba recibido mi esposa en una forma milagrosa, casi media hora antes del plazo fijado por el abogado. El juicio se llev a cabo despus de casi tres semanas de prisin, el 3 de enero de 1995. En aquella oscura tarde del juicio, nos leyeron nuevamente los cargos con la adicin de uno ms: se me acusaba tambin de dar dinero a mis amigos para cambiarles su fe islmica. Esto fue desmentido all mismo por los hermanos marroques que me acompaaban. Despus de la intervencin del abogado defensor y algunas preguntas formuladas por el presidente de los cinco magistrados, se nos dijo que el veredicto se dara dos das despus. Al conducirnos de regreso a la prisin central me qued sorprendido al constatar que aunque siempre me haban esposado al llevarnos de la crcel a los tribunales (o viceversa), esta vez yo era el nico entre todos que no haba sido esposado. El encargado de hacer esto, y quien haba estado en el juicio, no lo permiti. Al verle directamente a los ojos pude notar una clara expresin de simpata y amistad. En todo momento cre que el veredicto sera absolutorio porque haba razones de peso para que se nos concediera la libertad. Primero, porque haba una buena parte del pueblo de Dios que 107

estaba orando por m y por mi familia. Segundo, porque tenan solamente dos Biblias que me haban decomisado, una en rabe y la otra en espaol, y esto no era agravante como para decretar una condena. Tercero, porque saba que uno de los artculos de la ley constitucional de Marruecos dice que hay libertad de culto. El da 5 de enero nos llevaron nuevamente al mismo edificio y ante los mismos magistrados. Fue un golpe dursimo para m y para los dos hermanos marroques cuando se nos ley el veredicto declarndonos culpables. La condena para m era de un ao de prisin y quinientos dirhams (moneda marroqu) de multa y ocho meses de crcel para los dos hermanos rabes. Nos llevaron de nuevo a la prisin y nos introdujeron en las celdas. Yo senta que mi corazn iba a estallar, haca grandes esfuerzos por contenerme, pero las lgrimas me salan sin parar, el slo pensar que estara lejos de mi esposa y de mis hijas sin verles ni poderles ayudar tanto tiempo me produca una pena incontenible. Fue el da ms triste de mi vida. Al entrar en la celda los presos estaban ansiosos de conocer el veredicto. Se los hice saber no sin antes hacer un gran esfuerzo por controlar mis emociones. Unos trataron de darme nimo a su manera y me decan que no me preocupara tanto, que al italiano le quedaban once aos por cumplir en la prisin, as que un ao al fin y al cabo pasara pronto. Tena que permanecer por un ao en la crcel mientras que a King-Kong le quedaban solamente dos semanas para salir. Dnde quedaran mis palabras cuando le dije que l vera el da cuando el Seor Jess me sacara de la crcel? La pena de saber que estara separado de mi familia me ahogaba, el pesar que me embargaba era indescriptible y no lo poda soportar. Entr al sanitario y llor amargamente por un rato; luego, como pude, trat de disimular al salir. Unos me ofrecan pe108

dazos de pan, pero yo no tena el ms mnimo apetito. Eran cerca de las nueve de la noche. Me acost en el suelo sobre mi manta. Me senta desfallecer, me dola mucho la espalda, el cuello, las piernas, mi cuerpo todo era una postema. De pronto me di cuenta de que en ningn momento le haba pedido al Seor que se hiciera su voluntad en toda aquella situacin. Haba dado por hecho que saldra de la prisin, sin haber considerado que la voluntad de Dios poda ser otra! Le ped perdn al Seor y le dije que aun si fuera mayor el tiempo que tuviera que pasar en la crcel, lo hara con gozo, aceptando su voluntad en mi vida. Mi pecho iba a explotar, sent como si mi corazn se iba a detener... le ped a Dios que se hiciera su voluntad. Al da siguiente, algo verdaderamente sorprendente ocurri: aquel dolor que me haba agobiado por varios das haba desaparecido casi por completo. Me senta con un nimo renovado y yo mismo me sorprenda de aquel cambio tan radical. Escrib en un pedazo de papel que consegu, el esbozo de una carta para mi esposa, dndole nimo, recordndole que nuestras vidas estaban en las manos de Dios y que debamos aceptar su voluntad en todo momento. Saba que las autoridades de la prisin leeran aquella carta, pero eso me tena sin cuidado. Temprano por la tarde me sorprend cuando dos policas vinieron a sacarme de la crcel para comparecer en otra audiencia. Los reos estaban perplejos: me dijeron que para que un juicio de apelacin se llevara a cabo, era necesario esperar unos veinte o veinticinco das despus de la sentencia. Los otros dos hermanos marroques y yo fuimos llevados a otro edificio y ante otros magistrados. Nos hicieron las mismas preguntas que nos haban hecho en el tribunal del 3 de enero, as como algunas nuevas. Luego, los tres magistrados se retiraron a deliberar por unos 109

quince minutos. Regresaron al estrado. Entonces el presidente del tribunal me anunci: Se le levanta el ao de condena! Queda usted en libertad! A los otros dos hermanos marroques les dijo: Para que ustedes puedan quedar en libertad, es necesario que reciten en alta voz el credo musulmn. Aquellos hermanos, agobiados por el temor, as lo hicieron. Cuando nos introdujeron en el vehculo de la polica uno de ellos me dijo: Perdona, hemos tenido que hacer eso porque de otro modo, nos dejaran en la crcel y empezaran a perseguir a nuestras familias. Yo le dije: Dios te perdone, y si l lo hace, quin soy yo para no perdonarte? Llegamos a la prisin central para firmar el documento de salida. Al entrar a la celda para recoger las poqusimas cosas que tena, me preguntaron los reos qu haba pasado. Con mucho gozo les comuniqu que el veredicto haba sido absolutorio, e inmediatamente la mayora de ellos me felicitaron con emocin. Tom mis cosas, estrech sus manos a la vez que les deca que Dios haba mostrado su poder. Sal de la crcel en medio de aplausos. Yo alababa a Dios porque su gracia y misericordia se haban manifestado en forma excepcional. Era un da glorioso! l haba convertido un ao de prisin en un solo da! King-Kong haba visto cumplirse las palabras que antes le haba dicho: que l vera el da en el que el Seor Jess me sacara de la crcel! Todos haban sido testigos de la fidelidad y del poder de Dios! Eran casi las ocho de la noche cuando sal de la prisin. Enfrente de la entrada principal me esperaban mi esposa y mis 110

dos hijas. Nos abrazamos con mucha alegra, dando gracias al Todopoderoso. Fue uno de los das ms felices de mi vida... Pero a unos pasos de distancia se encontraba mirndonos fijamente uno de los detectives que me haba interrogado en la comisara. Usted tiene que ir a la comisara me dijo. Por qu, si ya se me ha decretado la libertad? Es solamente una formalidad me respondi. Me introdujeron en otro vehculo y me condujeron a la comisara. A mi esposa y a mis hijas no les permitieron ir conmigo. Al llegar me encontr de nuevo con el comisario que me haba interrogado el primer da de mi detencin, y a quien le haba compartido el plan de salvacin. Visiblemente conmovido al verme, me recibi con un beso en cada mejilla y me dijo: No cabe duda de que nuestro Seor Jess le ha liberado. Me invit a sentarme. Escribi algo a mquina, y despus de unos instantes nos dirigimos a la entrada principal. Mi esposa y mis dos hijas ya estaban esperndome all. Se retir por un momento y me dej a solas con ellas, pidindonos que no nos moviramos del lugar. Mi esposa aprovech para contarme que tambin haban detenido a un joven y a su padre, quienes se reunan conmigo para leer la Biblia. Al joven le haban causado quemaduras en el pecho con un cigarrillo, y a su padre le haban fracturado el brazo. Les haban dejado en libertad por falta de pruebas. Al regresar el comisario me dijo: Usted no puede irse a su casa ahora. Mi esposa, sorprendida al escucharle, le pregunt: Pero por qu, seor comisario? l ya fue puesto en libertad; yo soy su esposa estas son sus dos hijas, por favor djelo ir a casa! 111

No puedo, yo obedezco rdenes superiores respondi l. Quedamos perplejos. Mi esposa, al ver la determinacin del comisario le pregunt si yo iba a salir de all al da siguiente. l respondi afirmativamente y an mencion que me poda traer el desayuno. Me tuve que quedar nuevamente en la comisara y mi familia regres a casa desconcertada, pues obviamente era un nuevo abuso de autoridad. Luego me condujeron a un subterrneo, me decomisaron todo, incluso mi reloj, mis gafas y mi cinturn; me dejaron slo con camisa pantaln y zapatos sin cordones. Luego me introdujeron en un calabozo muy oscuro con cuatro bombillas amarillas en la parte superior que ayudaban a distinguir un poquito lo que haba dentro. Al entrar propuse en mi corazn ayunar todo el tiempo que permaneciera all. Me percat de que haba tres prisioneros acostados sobre el suelo. A Dios gracias, pude testificarles cuando me preguntaron por qu me haban llevado all. En ese lugar se perda la nocin del tiempo pues no se saba si era de da o de noche. No s cuantas noches haban transcurrido, cuando entr un polica para sacar a uno de los presos. En ese momento hubo claridad y pude ver una gran rata negra atravesando el calabozo. Se detuvo un momento en el centro y luego se perdi en la oscuridad. Por fortuna, encontr unas bolsas de plstico usadas y las colocaba a mi alrededor cuando tena sueo, para que cuando se acercara la rata hiciera ruido y as podra despertar y evitar su contacto e incluso una mordida. Dorma con la espalda contra la pared y las piernas recogidas. Al igual que en la prisin anterior, haba en el suelo un hoyo a modo de sanitario. Tambin haba en una de las paredes un pequeo agujero por donde sala un poquito de agua, all humedeca mis resecos labios para mitigar la sed. A los dos das llevaron pan con algo de beber a los dos prisioneros, pero para m no haba nada. De todas maneras yo haba de112

cidido ayunar. Despus supe por labios de mi esposa que a ella no le haban dejado pasar comida para m y le decan que nadie con mi nombre se encontraba recluido all. Durante el tiempo que estuve en ese calabozo, nunca haba orado tanto ni sentido la presencia tan real de Dios en mi vida como la sent entonces. Escuchaba un coro de voces masculinas que cantaban a Dios, y aunque no entenda lo que entonaban, sus voces lo hacan con un tremendo espritu de alabanza como jams lo haba escuchado. Yo agradeca a Dios porque aquella alabanza tan poderosa, aquellas voces tan impresionantes, me insuflaban nimo y mucha fortaleza. Despus de tres das sin comer ni beber nada, me sacaron y me condujeron nuevamente ante el comisario. Esta vez l fue bastante seco y cortante y me dijo que yo tena que salir inmediatamente del pas. Era la tarde del 9 de enero de 1995. Despus de haberme hecho esperar en pie por algunas horas en varias oficinas, fui llevado por fin hacia la frontera. Al pasar frente al apartamento donde haba vivido desde que haba llegado a Marruecos, el detective a quien se le haba asignado la funcin de acompaarme, me invit a despedirme de mi familia. Este gesto de gentileza de parte de este desconocido me impresion. Desafortunadamente, no encontr a nadie en casa, por lo que dej una nota a mi esposa explicndole que en esos momentos estaba siendo expulsado del pas. Luego el detective me condujo con un taxi hasta la frontera. All esper por largo tiempo en pie hasta que sal oficialmente de Marruecos. Empezaba a oscurecer cuando entr a Ceuta, ciudad fronteriza espaola. Me dirig a casa de unos hermanos en Cristo, quienes ya estaban al corriente de todo y me recibieron con mucho amor. Mi esposa y mis hijas haban quedado en Marruecos. Recin dos das despus me pude reencontrar con ellas: nos unimos en 113

un solo abrazo reconociendo con lgrimas en los ojos el poder y la misericordia de Dios. Fue un encuentro dramtico, pero al fin y al cabo feliz porque ya estbamos de nuevo juntos. En la casa donde habamos sido recibidos nos reunimos para orar y dar gracias. Me relat luego mi esposa cmo el Seor les haba protegido con su gran poder durante mi ausencia en medio de las muchas pruebas y preocupaciones que haban tenido que pasar. Realmente, me di cuenta de que ellas haban sufrido ms que yo. Me cont que cuando yo todava me encontraba en el calabozo, haba salido un artculo en el peridico que deca que yo ya haba sido expulsado de Marruecos. Al darse cuenta de dicho artculo se dirigi a la comisara para que le dieran una explicacin pero nadie le quiso dar ninguna informacin. Al verse frustrada ante tal situacin, pidi audiencia con el comisario, pero ste no se la concedi. Luego decidi ir al consulado espaol donde antes le haban dicho que se mantuviera en constante comunicacin con ellos porque queran protegerla como si se tratase de una ciudadana espaola. El cnsul de Espaa, al darse cuenta de todo lo que estaba ocurriendo llam a las oficinas de la frontera espaola y de otras crceles preguntando si saban algo sobre mi paradero, pero nadie le daba ninguna informacin. Mi esposa a quien le haban decomisado su pasaporte, intervenido su telfono y le vigilaban muy de cerca, fue con el abogado que me haba defendido a hablar con el fiscal, pero ste le dijo al abogado que su trabajo como defensor ya haba terminado y que no tena que inmiscuirse en forma personal en ese asunto, porque el caso ya estaba cerrado. El abogado le recomend a mi esposa que fuera inmediatamente a la oficina de Derechos Humanos a denunciar mi desaparicin, pero el cnsul de Espaa le aconsej que no lo hiciera, porque las autoridades estaban molestas por la gran presin diplomtica que estaban recibiendo a travs de cartas y llamadas 114

telefnicas del extranjero, y un reclamo de parte de Derechos Humanos les enfadara aun ms. El ministro de Relaciones Exteriores de Marruecos haba recibido cartas de embajadores, ministros y cnsules de varios pases intercediendo por m. Incluso el rey de Espaa, a instancias de la iglesia evanglica espaola, haba abogado por mi libertad. Me comparti tambin mi esposa que para nuestras hijas fue muy difcil concentrarse en sus estudios sabiendo que yo me encontraba en la crcel. La menor lloraba mucho y preguntaba con insistencia cundo regresara a casa. Mi esposa reciba a toda hora del da, pero sobre todo en la madrugada, llamadas telefnicas de hermanos de El Salvador, Espaa, Mxico, Guatemala, Argentina, Brasil, Inglaterra, Francia, Suiza, Estados Unidos y de otros pases, dndole nimo en aquella situacin. S, ciertamente la prueba fue muy dura, pero queremos dar testimonio pblico de la fidelidad de Dios. l estuvo en todo momento con nosotros, jams nos abandon y siempre nos fortaleci. De ningn modo siento odio por los musulmanes, ms bien comprendo que son el resultado del medio ambiente en que han nacido y crecido. Ellos se resisten a creer en Jesucristo y su evangelio porque piensan que traicionaran a sus antepasados, a su pas y a su cultura, pero esto no es cierto porque lo que realmente cambiara sera su corazn, recibiran el perdn de pecados y un verdadero propsito para vivir. No importa dnde me encuentre, quiero decirles a mis amigos musulmanes que Dios es amor. Ese amor lo mostr enviando a su Hijo a morir por nosotros para darnos la salvacin y la vida eterna.
A l, al nico y sabio Dios, nuestro Salvador, sea gloria y majestad, imperio y potencia, ahora y por todos los siglos! (Jud 25).

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APNDICE

A. Diario de conversaciones

Conversacin con mi amigo Said

DESPUS DE HABLAR de varios temas con mi amigo Said, l comenz a decirme: Nosotros debemos trabajar y hacer muchas cosas para ganar el cielo, en cambio ustedes los cristianos no hacen nada, solamente pedir perdn a Dios, y eso es todo. Nosotros le respond, para ser salvos y poder entrar en el cielo debemos arrepentirnos de todo corazn de nuestros pecados, reconocer que Cristo sufri en carne propia el castigo que merecamos, y abrir nuestros corazones para que l nos dirija con su santo amor. Creo que t y yo estamos de acuerdo en que Dios no ama al pecado pero s a los pecadores. Correcto. Y te has puesto a pensar de qu manera muestra Dios su amor para con nosotros? S, en que nos da la vista, los brazos, los pies, la comida, la casa y muchas cosas ms. 119

Eso ms bien es su misericordia, porque hay muchos que lo tienen todo pero rechazan a Cristo. Yo conozco a gente mala. Y por qu Dios no la castiga? Porque Dios es paciente y les est dando oportunidad para que se arrepientan y le confiesen sus pecados le dije. La verdad es que la manera en que Dios muestra su amor para con nosotros es en que siendo an pecadores, Cristo muri por nosotros para pagar por nuestras maldades. Nadie puede perdonar pecados, slo Dios! Dime, fue Jess un impostor? No me respondi. Entonces, por qu perdon a muchos sus pecados? Minti Jess alguna vez? No. Entonces por qu dijo: Yo soy la resurreccin y la vida; el que cree en m, aunque est muerto vivir?. Y por qu cuando le preguntaron si l era el Hijo de Dios, respondi afirmativamente? No, eso no lo dice el Corn, y tampoco voy a creer en otra cosa que no me hayan enseado mis padres y abuelos. Adems, la Biblia original se perdi y no se sabe lo que Jess realmente dijo. Yo le asegur: Hay pruebas cientficas e histricas que comprueban que nuestra Biblia es igual a la original. Por ejemplo, los rollos del Mar Muerto. Sad me interrumpi: Nosotros podemos reunirnos en cualquier mezquita pero 120

ustedes hacen muchas distinciones en su religin entre catlicos, protestantes, testigos de Jehov y otros ms. Y qu me dices de la enemistad entre sunnitas y chitas? Qu del rechazo de muchos de ustedes hacia los ahmadas? Esos no son verdaderos musulmanes me respondi, porque con sus interpretaciones falsas del Corn han cometido un gran error. Entonces admites que en el islam hay grandes divisiones? No, slo verdaderos y falsos musulmanes. Y no crees que eso es en s una divisin? le pregunt, a lo que me respondi un poco enfadado: Por ltimo yo no creo ni en Jess, ni en Mahoma, ni en nadie. Lo que yo quiero es vivir una vida con mis hijos y mi familia, sin molestar a nadie y sin que nadie me moleste. Precisamente le dije, Jess vino para darnos una vida abundante, con verdadero propsito, una vida de paz y armona con tu prjimo. Cmo puede ser mi prjimo algn norteamericano o europeo si ellos han sido los causantes de las guerras mundiales y de todas las calamidades y corrupciones que hay en el mundo? Adems, Estados Unidos siempre ha ayudado a nuestros enemigos. Sabes t le pregunt que Jess dijo que debamos orar aun por nuestros enemigos y perdonar a los que nos ofenden? Eso no vale en la prctica contest, porque si alguien entra a tu casa y quiere atacar a tu hijo, t no vas a contra atacar para defenderte? Dios ha prometido protegernos. Adems dijo: No matars. 121

No me respondi, si alguien nos ataca, o ataca nuestra religin, podemos matar para defendernos. Debes saber que Jess dijo: Todos los que tomen espada, a espada morirn. Tambin debes recordar que la violencia engendra ms violencia. No es a travs de la guerra, ni a travs del terror, ni de tcticas intimidatorias, ni de ninguna accin violenta que se lograr la paz en el mundo; solamente a travs del amor y perdn de Dios en la persona del Seor Jesucristo, quien vino del cielo para dar su vida en rescate por muchos y hacer de todas las naciones una familia unida en su amor. T hablas mucho de Jess pero no de Mahoma. Mahoma tambin fue elegido por Dios, porque Dios dijo que el que naciera con un lunar grande en la espalda, se sera su enviado. Y Mahoma lo tena! Y an as t no crees en l? Jess le dije es el nico que jams pec. S pec, porque sac a golpes a los que estaban vendiendo dentro del templo. Los que estaban all haban convertido el templo en una cueva de ladrones. Jess no golpe a nadie, sino que con una cuerda ech por el suelo la mesa de los cambistas, abri las puertas de las jaulas de los pjaros y dej libres a otros animales. Jess limpi de bandidos la casa de su Padre con la misma mansedumbre que cuando llev la cruz al Calvario, y es un cuadro de la justicia que l har en el da del Juicio. S, pero se enoj, no es cierto? Si t o yo nos enojamos le dije podemos cometer pecado porque somos imperfectos, pero Dios es santo y perfecto, por lo que su ira es santa y su justicia solamente puede ser hecha por l mismo. Y si Dios es perfecto y lo sabe todo, por qu plant el rbol 122

del fruto prohibido en el paraso, si saba que Adn y Eva iban a pecar? Dios quiso dar a Adn y a Eva una oportunidad para que obedecieran. Esto nos ensea que toda desobediencia a Dios resulta en la separacin de l, lo cual representa la muerte espiritual. En realidad, la vida en Cristo es incomparablemente bella. Said me coment: Pero todo hombre bueno tiene que casarse y tener hijos, y Jess no se cas ni tuvo hijos. Acaso ustedes no dicen que Dios no puede casarse? Adems, tienes que saber que nunca se cas porque desde que naci se tuvo que mantener totalmente consagrado hasta llegar al santo sacrificio de la cruz como un cordero santo, sin mancha, para derramar su sangre, sangre divina, para el perdn de nuestros pecados Este es el Cordero de Dios! Y nosotros, los que le hemos recibido, somos sus hijos espirituales, no nacidos por la voluntad de hombre sino por la gracia de Dios. No me dijo, porque entonces nos volvemos vampiros, y a m la sangre me da miedo. Acaso ustedes no creen que la sangre derramada de un cordero tiene poder para proteger al que lo sacrifica? Me respondi: Eso es lo que algunos creen, pero yo no.

Conversacin con mi amigo Driss

Al comenzar a conversar con mi amigo Driss, me dijo: Debemos pedirle a Dios que nos d lo necesario. Si tenemos demasiado, nos olvidamos de l, y si tenemos muy poco, deseamos lo ajeno. Cuando morimos, lo nico que dejamos son tres cosas: la familia, el dinero y nuestro trabajo. El dinero se pierde, 123

la familia se llega a olvidar de nosotros; lo nico que contina es nuestro trabajo, sea bueno o malo. Hay algunos que dicen: Mi ropa, Mi casa, Mi dinero, pero no se dan cuenta de que nada nos pertenece. Todo es de Dios, de quien procede lo bueno y lo malo. Yo le coment: Has razonado bien, excepto en lo ltimo que has dicho, porque Dios es el Padre de las luces, en l no hay la ms mnima variacin de sombra, por lo tanto, de l no puede salir nada malo. Lo que s puede pasar es que si nos apartamos de l el mal nos alcanzar. Tambin hay casos en que Dios permite que nos llegue el mal, pero es para fortalecer nuestra fe y as purificar nuestras conciencias. Despus de reflexionar por varios segundos, Driss dijo: S, es cierto, nosotros somos los malos, y por eso debemos limpiarnos delante de Dios, y la nica manera que l nos perdone es cuando nosotros reconocemos que slo l nos puede ayudar en nuestra necesidad. No es por cumplir con el Ramadn ni por rezos ni por limosnas; es cuando vamos a l y le pedimos que nos ayude Entonces es cuando l nos perdona! Yo le aclar: Tienes que saber que el nico que puede limpiarnos de nuestros pecados es Jess, el Mesas, y no podemos llegar hasta Dios sino por l. Jess dijo: Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre sino por m. Driss me interrumpi: No! No tenemos necesidad de intermediarios, podemos ir directamente a l! Dios no necesita ni de hijos ni de hermanos ni de primos ni de nadie! l es uno solo! Ciertamente, Dios uno es. Precisamente Jess dijo: Yo y el 124

Padre uno somos. Si t dices que Dios es uno, por qu en el Corn siempre que se supone que Dios habla lo hace en plural y usa verbos como: dijimos, hicimos, aceptamos, dimos...? Esa es una manera de hablar que aun hoy tenemos! interrumpi l, un poco alterado. Jess es slo un profeta entre los ciento veinte mil que Dios ha enviado, y no es mayor que otros como Adn, Abraham o Moiss. Disculpa le repliqu, pero Adn no es profeta. Pues s, lo es porque el Corn as lo dice! S cuestion, tambin dice que el nombre del padre de Abraham era Azar y no Tar como dice la Biblia. Tambin... Driss interrumpi otra vez: La Biblia tiene ms de cincuenta mil errores. Adems, las genealogas de Jess se contradicen. Y cules son esos errores y las contradicciones en las genealogas? Te traer un amigo que sabe mucho de esto y l te lo va a decir. Me encantara conocerlo le manifest, y as tendra la oportunidad de compartirle que Dios le ama y por eso envi a Jess para salvarle a l, a ti y a m y a todos los que aceptan su sacrificio en Driss me volvi a interrumpir: No, a l no lo vas a convencer, ni tampoco a m, porque aun si Jess bajara del cielo y me hablara, no le creera. T has venido aqu a misionar, pero este no es tu lugar, vete al frica negra, all tal vez te van a escuchar, pero nunca nosotros! Y ahora tengo que irme! Mi amigo parti, visiblemente enfadado. 125

Conversacin con Chaquib

Despus de haber charlado unos momentos con mi amigo Chaquib, ste me expres: Los mtodos de Dios para comunicarse con la humanidad han sido siempre nuevos. Es as como Dios hizo primeramente un pacto con Abraham. Luego le dio la ley a Moiss, lo cual era ya algo bastante concreto para la humanidad. Despus dio a Jess los evangelios, los cuales superaban la ley dada a Moiss, pero como se sabe, los judos alteraron la Escritura y por eso Dios tuvo que enviar su ltima y ms completa revelacin que superaba todas las dems: el Corn, el cual ha permanecido intacto desde que se escribi. Yo trat de aclarar su error: Tienes que saber... Chaquib me interrumpi: Es un libro que baj del cielo para que nosotros lo leyramos, y porque baj del cielo tiene palabras que nadie conoce. Yo trat de proseguir, pero l me interrumpi dos veces ms. Entonces le dije: Escchame, Chaquib, si t no me permites hablar, ests haciendo un monlogo. Dime todo lo que t quieras y te escuchar, pero despus, por favor, permteme que hable por un momento. Ah! Perdona, hombre! De acuerdo! Tienes que saber que las primeras versiones del Corn fueron quemadas por considerarse inexactas, y de eso dan fe antiguos documentos existentes hoy en da en famosas universidades europeas... Chaquib me interrumpi nuevamente: Seguramente que son documentos falsos. Adems, ningn documento puede negar que la gran diferencia entre ustedes los 126

cristianos y nosotros los musulmanes es que ustedes tienen tres dioses, nosotros tenemos uno slo: Al. Nosotros le dije tambin tenemos un solo Dios, pero con tres manifestaciones distintas: en la persona del Padre, en la persona del Hijo y en la persona del Espritu Santo. Este es un misterio muy grande y muy difcil de comprender, pero para que tengas una pequea idea, permteme decirte que t mismo eres tres elementos en un solo ser: t tienes un alma para comunicarte con Dios, tambin tienes una mente para pensar y hacer tus decisiones, tienes un cuerpo para poder moverte y desplazarte donde t quieras. S, tres elementos que forman un solo ser. Puedo darte otro ejemplo: yo soy padre porque tengo dos hijas; soy hijo porque tengo a mi padre que vive en mi pas; y soy esposo porque estoy casado. Tres manifestaciones distintas de un solo ser, porque cuando le hablo a mis hijas, lo hago con amor pero con autoridad, cuando le hablo a mi padre lo hago con mucho respeto, con una actitud distinta, y cuando le hablo a mi esposa lo hago de una manera especial, diferente de las dems. Pero lo interesante de todo esto es que estas tres manifestaciones, aun siendo diferentes, vienen de un solo ser. De igual manera, Padre, Hijo y Espritu Santo, son tres manifestaciones de la misma esencia del Dios Todopoderoso. Chaquib exclam: No, eso es irracional porque si hay tres seres, lgicamente tienen que haber tres personas! Dios no quiere que pensemos de esa manera, yo creo que lo que l quiere es que no le hagamos mal a nadie, que tengamos una sola esposa y que ayudemos a los dems y que de esta manera todos vivamos en paz.

Conversacin con mi amigo Tarik

Cierto da, caminando por el centro de la ciudad, me encontr 127

con mi amigo Tarik, a quien invit a una cafetera cercana a tomar una taza de caf. Empezamos a hablar de lo difcil que era la vida, y me dijo que l trabajaba mucho para ganar muy poco dinero, e incluso muchas veces tena que desvelarse. Trabajaba en una imprenta, y buscaba otro trabajo que no fuera tan pesado, pero no poda encontrarlo. Me comparti que se haba comprometido en casamiento, pero no tena suficiente dinero para la boda, por lo que crea que si se trasladaba a Espaa podra encontrar un trabajo y de esa manera ahorrara mucho para la celebracin de su boda. Despus de escucharle, le dije que sus palabras me recordaban mi vida pasada, cuando yo era joven como l. Le compart que en aquel entonces yo tambin me senta cansado, porque tena que estudiar y trabajar para ayudar a mis padres. Pero lo que realmente me oprima no era el cansancio sino la vida pecaminosa que llevaba, porque tena una existencia sin un verdadero propsito, en medio de la bebida, el tabaco y acciones mundanas. Le compart que un da despus que alguien me explicara quin realmente era Jess, y despus de leer algunos pasajes de la Biblia, yo me haba arrepentido de mis pecados y haba aceptado al Seor Jess como el Salvador de mi vida, y que como consecuencia una paz muy grande haba inundado mi corazn. l pregunt: Entonces el Corn no es un buen libro? Eso tienes que decidirlo t, despus de leer la Biblia. Dime, cul libro fue escrito primero, la Biblia o el Corn? No s me contest un poco triste. Fue la Biblia, y mucho material que se encuentra en el Corn ha sido tomado de ella y se ha empleado en forma modificada. T has ledo el Corn en rabe? 128

No s hablar ni leer el rabe clsico, pero he ledo la traduccin al espaol. Ah, no, si no sabes leer el rabe clsico no puedes comprender el Corn, porque al traducirlo a otro idioma ya no es lo mismo! Ah s? Pues con la Biblia no es as, porque no importa a qu idioma se traduzca, el significado es siempre igual, lo que quiere decir que su mensaje es para todo el mundo. Tarik, despus de recitar un pasaje del Corn de memoria me dijo: Ustedes, los cristianos, dicen que Jess es el Hijo de Dios, pero eso no es cierto porque Dios no puede casarse con una mujer para tener un hijo. Nuestro libro, el Corn, dice que Sidna Asa (nuestro Seor Jess) es hijo de Mara, pero no de Dios. Tarik le manifest, ciertamente el Seor Jess naci de la virgen Mara, pero fue el Espritu Santo quien desde el cielo hizo el milagro para que ella concibiera a Jess. Si el Espritu del Altsimo cubri con su sombra a aquella bendita mujer, no crees que es lgico y justo reconocer que ese nio haya salido de Dios mismo? Tarik me respondi: No, porque nuestro libro, que es la ltima revelacin de Dios, nos ensea que Jess fue formado del polvo, al igual que Adn. Adems, en el Corn est todo lo que dice la Biblia, por eso ya no necesitamos leerla. En el Corn hay ciertas referencias bblicas, pero son inexactas. T no debes temer leer la Biblia. Yo he ledo el Corn y mi fe sigue igual. Yo nac en este pas islmico, as que desde que nac soy musulmn, y as voy a morir. 129

Y despus de morir, adnde ir tu alma? Con su dedo me seal hacia arriba. Qu bueno que quieras ir al cielo! Y por qu crees que irs al cielo? le pregunt. Porque soy bueno me dijo, un poco indeciso. Has mentido alguna vez? le pregunt. No. Bien, t dices que eres bueno, pero la Biblia firma que no hay ni siquiera uno bueno en el mundo, porque todos hemos pecado. Solamente Jess es bueno, porque jams pec. Nuestro profeta Mahoma, que la paz sea con l, tampoco pec. No has ledo en el Corn, que Mahoma tuvo once mujeres y dos concubinas y adems se cas con la mujer de su hijo adoptivo? Cmo? Eso no puede ser! A lo mejor t no has comprendido bien. Claro que lo he comprendido bien! repuse, lo puedes leer por ti mismo, se encuentra en 33.38 del Corn. El Corn es un libro que baj del cielo y le fue entregado a nuestro profeta Mahoma, que la paz sea con l, y all dice todo lo que l tena que hacer. Adems, con el Corn baj el idioma rabe que hablamos hoy, porque antes se hablaba otro idioma. Tarik le respond, en Espaa tuve un amigo musulmn, quien me regal un Corn para que lo leyera. Yo a mi vez le regal una Biblia. Empezamos a leer los dos libros y al final l se convenci de que Jess realmente le amaba y que haba venido desde el cielo para morir por l y as perdonarle sus pecados. l ahora es un mesiji (seguidor de Jess) que ha encontrado el gozo de vivir para Dios. 130

Yo no puedo traicionar a mi familia ni a mi pas. No traicionars ni a tu pas, ni a tu familia le dije, sino que los amars aun ms. Luego le pregunt: Quin te da la vida? Dios. Muy bien, entonces, por qu Jess dijo que l era el camino, la verdad y la vida? Tarik no respondi, por lo que prosegu con otra pregunta: Ests satisfecho con tu vida? No me dijo, tengo amigos que solamente me inducen a hacer cosas malas. Pero si me propongo ser bueno, puedo lograrlo! Escucha, Tarik, t eres muy joven, y si vas por la vida por ti mismo, tendrs muchos fracasos y lgrimas. El Seor Jess no te ofrece mucho dinero ni grandes posesiones materiales, pero te promete lo necesario para que t y tu familia vivan en paz y con gozo en el corazn. Tarik guard unos minutos de silencio. Yo prosegu: Nuestro Seor Jess nos am tanto, que dio su vida por ti y por m. l quiere entrar en tu corazn y dirigirte a travs de la vida. Quieres recibir al Seor Jess en estos momentos? Tarik, cabizbajo dijo: S. Para asegurarme de que realmente comprenda lo que le deca, insist: Si t dices que le quieres recibir, que no sea simplemente porque yo te lo digo, sino porque realmente te das cuenta de que 131

lo necesitas. Quieres de verdad recibir al Seor Jess en tu corazn? S. Por qu le quieres recibir? Porque es bueno. Entonces lo que tienes que hacer es pedirle perdn por tus pecados. Reconocer el sacrificio que l hizo en la cruz por ti. Pedirle que entre en tu corazn y agradecerle por la vida eterna que hoy te da. Quieres hacerlo con tus propias palabras o ir repitiendo despus de m una oracin? Despus de ti. Yo or dando gracias por esta profesin de fe y le ped al Seor que Tarik comprendiera lo que estaba haciendo. Luego Tarik repiti frase por frase la oracin que yo hice.

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B. Cuentos y chistes rabes

DURANTE MI ESTADA en el norte de frica tuve la oportunidad de escuchar varios relatos, algunos de ellos interesantes, otros totalmente exagerados. A todas luces era evidente que en la mayora de ellos haba una tendencia a fortalecer el espritu patritico.

Guerreros y batallas
Anas, un amigo mo me cont que hace mucho tiempo existi un guerrero muy valiente, quien haba participado en muchas batallas. Un da, en pleno fragor del combate se percat de que l y los suyos haban cado en una emboscada. Inmediatamente busc al lder portador del estandarte que estaba mal herido. Tom la insignia en sus manos y gui a sus compaeros a un lugar seguro. Al da siguiente, despus de reorganizar con los dems lderes el ejrcito, contraatacaron cabalgando en briosos caballos, llevando el estandarte al frente de los guerreros. Al acercarse al enemigo, montado sobre su corcel, fue herido en el brazo derecho; tom con su brazo izquierdo la insignia y sigui adelante. No ha133

ba avanzado muchos metros cuando fue herido en la pierna derecha, luego en la izquierda y un instante despus en el brazo izquierdo. Sosteniendo a duras penas el estandarte, hizo un esfuerzo sobrehumano y logr asirlo con su boca, y en esta difcil situacin gui a sus compaeros hasta el jefe enemigo, a quien dieron muerte con los dems guerreros, obteniendo as una gran victoria gracias al enorme esfuerzo de este valiente patriota. Anas me cont tambin otra historia. Sucedi cuando Mahoma con sus cerca de tres mil guerreros, tena que enfrentarse a uno de sus peores enemigos, cuyo ejrcito era de casi treinta mil hombres. Mahoma se preocup mucho y fue a una cueva, donde se le apareci un ngel quien le dijo que no se preocupara porque Dios le iba a enviar muchos ngeles para ayudarle a ganar la batalla. Mahoma comunic a sus guerreros esta promesa hecha por el ngel e inmediatamente se dirigieron a pelear contra su poderoso enemigo, a quien despus de una cruenta batalla vencieron, aniquilndolo por completo. Luego se le apareci el ngel a Mahoma y le dijo que l le haba hecho esa promesa solamente para darle nimo, pero que en realidad, ningn ngel les haba ayudado a ganar la batalla, sino que ellos haban obtenido la victoria por haber peleado con toda valenta. Otros de los relatos que escuch siguen a continuacin.

Los cuatro sueos

Un da, un rey sali a pasear al bosque con algunos sbditos. Al llegar a la orilla de un riachuelo, dispuso apartarse de su comitiva y se intern en la espesura de los rboles solo, sin la compaa de nadie. El rey despus de caminar un poco, se perdi, pero afortunadamente encontr una vieja casa en la cual entr. All se encontraban tres hombres de mal aspecto, quienes eran 134

ladrones y trataban de fingir que dorman. An no haba entrado el rey hasta el centro de la casa cuando se levant uno de ellos y dijo: Ah, seor! Anoche so que el primero que yo viera, me dara su reloj de oro. El rey tom su reloj de oro y se lo dio. Se levant el segundo ladrn y dijo: Yo so que t me dabas todo el dinero que tenas en tus bolsillos. El rey sac todo el dinero que tena y se lo entreg. Luego se levant el tercer ladrn y dijo: Te juro por Al que vi en mi sueo que t me dabas la trompeta de plata que cuelga de tu cuello. El forajido alarg su mano, arrebat la trompeta del cuello del rey y agreg: Ensame cmo se toca. El rey tom la trompeta y empez a soplarla con fuerza. Sus sbditos escucharon y comprendieron que el rey se encontraba en peligro. Inmediatamente se dirigieron al lugar y capturaron a los tres ladrones. El rey entonces les dijo: Yo tambin tuve un sueo extrao. So que esta noche daba la orden para que tres ladrones fueran encarcelados.

El buen gusto
Un grupo de guerreros se perdi en el desierto y despus de muchos das, ya sin provisiones, estaba a punto de perecer. El capitn pidi un voluntario que estuviera dispuesto a morir para que los dems se lo comieran y as pudieran sobrevivir. Al ver que nadie se ofreca, tom una pistola y se iba a suicidar de un tiro en 135

la cabeza. Inmediatamente uno de los guerreros dio un paso al frente. El capitn exclam: Ah!, t te ofreces como voluntario? A lo cual responde el guerrero: No, yo slo quera decirle que se d el tiro en otro lado, porque a m lo que ms me gusta son los sesos!

El guardin agradecido
Haba una vez un rey poderoso que posea un reino muy grande, pero estaba preocupado porque un ejrcito enemigo estaba continuamente saqueando sus ciudades. Un da el rey les tendi una trampa, captur a su jefe y mat al resto. El jefe fue llevado fuertemente custodiado hasta el palacio donde el rey le sentenci a morir el da siguiente. El rey, sabiendo que ste era un valiente y astuto guerrero, orden que, para evitar que escapara, lo maniataran y lo llevaran a la casa de Amn, su ms avezado guerrero, para que l personalmente lo vigilara durante toda la noche. Al atardecer, Amn se sent frente al prisionero y con mucha calma le pregunt de dnde era. Este le dijo que era de Ariad. Amn le coment que conoca muy bien esa ciudad y que tena muy buenos recuerdos de ese lugar. Le cont que haca casi quince aos que l haba vivido all y que un da haba estado a punto de morir a manos de unos ladrones pero su amigo Abdulah El Karim, a quien ya no haba visto, pero que recordaba con mucho agradecimiento, le haba salvado la vida. El prisionero le dijo que l era Abdulah El Karim. Amn se ech hacia atrs muy sorprendido, luego con los ojos desorbitados se le acerc para ver detenidamente su rostro, y constat que, efectivamente, aunque con unas arrugas de ms y la barba y el pelo un poco encanecidos, se trataba de su amigo. Se le ech al cuello muy emocionado y le pidi perdn por la forma en que haba sido tratado. 136

Abdulah le dijo que se alegraba mucho de verle nuevamente y que no se preocupara por l, que si su destino era morir al da siguiente, l estaba resignado y tranquilo. Al amanecer Amn habl con el rey y le cont todo lo sucedido. Tambin le rog que por favor le dejara morir en lugar de su amigo para mostrarle su agradecimiento. El rey, impresionado por la nobleza de su sbdito le dijo que no era necesario, e inmediatamente anul la pena de muerte para Abdulah El Karim y le dio la libertad. Abdulah, en agradecimiento, sirvi al rey y luch por l por el resto de su vida.

El osado capitn
Una vez un temible capitn musulmn captur un barco enemigo. Los tripulantes, al verse vencidos le pidieron que les perdonara la vida y que a cambio ellos engrosaran sus filas y lucharan por l. El capitn acept; luego, con los dos barcos captur un tercero e hizo lo mismo. Ms tarde decidi atracar en un territorio enemigo y desembarc con todos los hombres de sus tres barcos. Para sorpresa suya le esperaba un ejrcito que era cinco veces mayor que el suyo. Al verse imposibilitado de hacerle frente orden quemar los barcos para concienciar a sus guerreros de que la nica alternativa era vencer. Estos, al verse en tan desesperada situacin, lucharon con tal arrojo y valenta que lograron finalmente la victoria.

El rey bueno
Era un rey que amaba a su pueblo y quera lo mejor para todos. Pidi a varios sbditos de su palacio que se mezclaran entre la gente y escucharan los comentarios acerca de l. Los sbditos, para hacer que el rey se sintiera bien le decan que todos se expre137

saban a su favor. Sin embargo, uno de ellos le deca lo contrario. El rey decidi dejar su trono por unos das y se disfraz de pobre para parecer como uno de ellos. Un da, al caminar por una estrecha calle vio dentro de una casa a cuatro nios que lloraban frente a una mujer. Cerca de la mujer haba una cocina improvisada con una olla hirviendo. El disfrazado rey llam a la puerta y al ser recibido le pregunt a la mujer por qu lloraban los nios. Ella le dijo que desde haca varios das que no coman y que por las noches ella pona en el fuego esa olla con agua dentro y les deca a los nios que esperaran que se cocinaran unas verduras que estaba preparando. Cuando los nios se cansaban de esperar, les ordenaba que se fueran a dormir. La mujer tambin le dijo al rey que as como ellos, haba otras familias porque el rey que tenan era muy indiferente con el sufrimiento del pueblo. El rey sali de la casa muy triste y se dirigi al palacio, tom muchos alimentos, los ech en un saco, se lo coloc sobre su hombro y lo llev a la mujer con los nios, se quit el disfraz, se identific y le dijo: Vuestro rey os ama y hoy os ha visitado, y aun tengo que visitar otras casas para que todos conozcan cunto realmente les amo.

El falso capitn
Un da dos marroques, quienes eran amigos inseparables, decidieron irse a Espaa. Careciendo de medios econmicos para hacerlo en forma legal, tuvieron que arriesgarse a irse ilegalmente. Al llegar a Espaa, marchaban juntos un da por una de las calles de la ciudad, cuando repentinamente uno de ellos encontr una billetera que contena la tarjeta de identidad de un capitn de la polica. Despus de discutir acaloradamente por la posesin de ese do138

cumento, finalmente el otro le arrebat la billetera. En cuanto la tuvo en sus manos, aparecieron dos policas y les pidieron sus documentos. El que se haba hecho a la fuerza de la tarjeta de identidad del capitn, instintivamente se la dio. Los policas al ver el documento inmediatamente le saludaron muy respetuosamente. Luego le pidieron los documentos al otro, quien un poco molesto les dijo: Esa tarjeta es ma, porque yo la encontr primero.

La tetera humana
En cierta ocasin una mujer fue a pedir prestada una tetera a una de sus vecinas. Su amiga le prest la nica tetera grande que tena, pero le dijo que se la cuidara porque le haba costado mucho dinero. La mujer le dijo que no se preocupara, que ella la cuidara como cosa propia. Al cabo de varios das la mujer que haba pedido prestada la tetera regres a casa de su vecina y le devolvi la tetera junto con otra tetera pequeita, y le dijo que algo extrao haba pasado: que la tetera haba tenido una teterita. La vecina se sorprendi mucho pero le manifest que aunque no lo comprenda, se alegraba que eso hubiera sucedido. Despus de un mes, la mujer volvi a solicitarle la misma tetera a su vecina, quien con mucho gusto se la volvi a prestar. Pasaron los das, las semanas, los meses, hasta que la vecina le pregunt a la mujer si ya haba desocupado la tetera. Esta le respondi que no se haba atrevido a decrselo para que no se sintiera mal, pero que desafortunadamente la tetera haba muerto.

El ganador absoluto
Este chiste me lo cont Ahmed, un amigo marroqu. Un egipcio, un holands y un marroqu pasaban por una jaula donde se encontraba un gorila que apestaba mucho. Ellos decidieron hacer 139

una apuesta en la que el que lograra permanecer por ms tiempo dentro de la jaula junto al gorila, sera considerado como el ms valiente. Entr el egipcio y despus de dos minutos de permanecer junto al gorila no soport por ms tiempo el mal olor e inmediatamente sali de la jaula. Entr el holands y despus de dos minutos y medio sali desesperado de la jaula pidiendo aire puro. Luego entr el marroqu... y el gorila sali corriendo!

El polica sabelotodo
Una joven llamada Nadia tena tres hermanos, quienes continuamente discutan y peleaban entre s. El mayor se llamaba Nadie, el mediano Ninguno y el menor Tonto. Un da Nadie y Ninguno empezaron a maltratar a Tonto. ste, al verse acosado logr huir y casualmente se encontr con un polica, a quien jadeando le dijo: Seor polica, Nadie me insult y Ninguno me peg! Usted de verdad que es tonto! Cmo lo saba?

La voz de fuego
Los campesinos del norte de Marruecos tienen fama de comer los alimentos muy calientes, en cambio los que viven en las ciudades los comen sin calentar. Se cuenta que una vez, un hombre que viva en la ciudad fue invitado por un campesino a comer en su casa. Cuando estaba la familia reunida para comer, los dos hombres se sentaron a la par. Empezaron todos a comer, excepto el invitado quien al ver el humo que despedan los alimentos no se atreva a probarlos. El campesino, al darse cuenta, volvi su rostro hacia el de su invitado, y al invitarle efusivamente a comer... le quem la cara! 140

La puerta real
Un da en un manicomio, un psiquiatra quera saber si los pacientes estaban mejorando, y dibuj una puerta en la pared para observar sus reacciones. Vino el primero y cuando vio la puerta dibujada fue y trat de abrirla buscando desesperadamente el picaporte. Al no encontrarlo se enfad mucho y empez a golpearse la cabeza contra la pared y luego se fue. Despus vinieron otros dos e hicieron lo mismo, pero luego vino otro, vio la puerta dibujada y se fue a sentar a una silla. El psiquiatra al ver su actitud le dijo: Muy bien, Toms, veo que ya ests progresando, porque t has visto el dibujo de la puerta y no has tratado de abrirla. El paciente respondi: Y para qu?, si yo tengo la llave!

Bon apptit!
Un rey se preparaba para recibir al primer ministro de su pas vecino, y tena dentro de su comitiva de servicio un vasallo bastante descuidado. Por lo tanto, decidi hablar con l para que no cometiera ningn error. Le llam y le dijo: Escucha, cuando yo est comiendo con el primer ministro y t nos sirvas o pases muy cerca nos debes decir: Bon apptit!. El vasallo prometi al rey hacerlo y se retir. Al da siguiente, cuando el rey y el primer ministro coman, el vasallo se aproxim a ellos para servirles el postre y les dijo: Bon apptit! Ms tarde el rey y el primer ministro se sentaron en el gran saln y cuando hablaban se acerc el vasallo y le dijo al rey: Bon apptit! Se retir el vasallo y despus de un rato se les acerc otra vez 141

y dijo lo mismo. Despus que el primer ministro se hubo retirado del palacio el rey, muy enfadado, mand llamar a su vasallo y le dijo: Yo te dije que nos dijeras bon apptit cuando estuviramos comiendo! S, su majestad, pero yo vi que usted le estaba comiendo el coco!

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C. Cristianos de Marruecos bajo acoso

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Cometieron el peor pecado contra su religin: convertirse al cristianismo

ES USTED ESPA o misionero?. Gilberto Orellana tiene an grabada la pregunta del comisario de polica de Tetun que le interrog largo y tendido hace una dcada. El jefe guard las formas, pero algunos de sus subordinados le insultaron y le amenazaron al tiempo que le gritaban: Dinos qu es lo que haces en Marruecos!. Le levantaron la mano, pero nunca le pegaron. Tras aos de estancia en la capital del antiguo protectorado espaol, Orellana haba sido descubierto. Este salvadoreo que ejerca como profesor de msica en el conservatorio de Tetun era tambin pastor evanglico que se esforzaba, con mucha discrecin, en convertir a colegas y alumnos.
Artculo escrito por Ignacio Cembrero (Casablanca, Marruecos), publicado en el diario de mayor tiraje de Espaa, El Pas, en su edicin dominical del 26 de febrero de 2006, pp. 4-5.
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Excepto una pequea minora juda de unas 3.500 almas, en Marruecos toda la poblacin es, en teora, musulmana. El Cdigo Penal reconoce la libertad de culto, pero su artculo 220 tambin prev entre seis meses y tres aos de crcel para todo aquel que intente quebrar la fe musulmana, es decir, para los que hacen proselitismo. Algunos escolares no queran ni siquiera tocar la Biblia, recuerda ahora Orellana en su piso de Mlaga, donde se instal con su familia en 1995. A veces dejaban de hablarme cuando les empezaba a dar cuenta de mi fe, prosigue. Otros, en cambio, se adentraron por el camino propuesto por el pastor. Hubo cinco bautismos en la baera de mi casa y un sexto, el de una hermana algo gordita, en el mar, afirma orgulloso. Esa labor le vali una condena a un ao de crcel, aunque slo pas tres semanas en el presidio de Tetun, hacinado en una celda con 16 traficantes de droga. La movilizacin internacional hizo que el juicio de apelacin se celebrase rpidamente. Qued absuelto y, tras pasar 72 horas en una comisara sin comer ni beber, fue expulsado a Ceuta. Los conversos marroques, a los que les haban cado ocho meses de crcel, fueron tambin puestos en libertad por el tribunal de apelacin tetuan despus de recitar la profesin de fe musulmana: No hay ms Dios que Al y Mahoma es su Profeta. Al hacerlo, las ovejas descarriadas volvan, al menos formalmente, al rebao de la ortodoxia religiosa. A estos dos discpulos de Orellana la polica marroqu les asest unos cuantos golpes. Yussef, nombre supuesto, estudiante de Ciencias de Taourit, una pequea ciudad situada no muy lejos de Melilla, tuvo una experiencia parecida hace tan slo nueve meses, despus de haberse convertido siguiendo los programas de SAT 7, una televisin evanglica en lengua rabe con sede en Beirut. 144

En plena noche, unos gendarmes le sacaron a trompicones de la cama para interrogarle en el cuartelillo sobre su fe cristiana. Le propinaron algn que otro puntapi antes de soltarle. Le dije que en el Marruecos de hoy en da el ciudadano vctima de abusos dispone de cauces para tratar de hacer valer sus derechos, pero el chaval tena exmenes y su prioridad era sacarlos y no dedicar tiempo a protestar por lo sucedido. El que cuenta su conversacin con Yussef es Al, marroqu y pastor evanglico en el este del pas. A condicin de que su verdadero nombre y el de la ciudad donde ejerce no figure en este peridico, ha accedido a conversar con este corresponsal en un populoso caf. No ha sido fcil dar con Al ni con sus correligionarios. Las iglesias marroques no figuran en la gua telefnica ni disponen de pginas web. Las iglesias catlicas o protestantes, que gozan de un estatuto legal en Marruecos y que slo pueden atender a fieles europeos y subsaharianos, apenas conocen a los conversos y no facilitan sus nmeros. Una larga cadena de contactos permite localizarles. Cuando uno de ellos otorga su confianza al periodista, toda la comunidad se abre. Lo que le pas al pastor centroamericano, e incluso al hermano Yussef, es irrepetible en las grandes ciudades de Marruecos, asevera Al mientras bebe a sorbitos su caf. A los cristianos nos siguen convocando de vez en cuando a comisara, a m me citaron la ltima vez hace un par de meses, pero es para charlas en tono amistoso en las que intentan sonsacarnos cosas, aade. No hay golpes, ni amenazas, ni advertencias ni mucho menos crcel como los hubo en tiempos de Hassan II. Slo hay, digamos, exceso de celo en lugares pequeos. El problema, prosigue mientras mira de reojo buscando a algn hipottico sopln sentado cerca de nuestra mesa, ya no son las autoridades, aunque en Massa, al sur del pas, Jamaa Ait 145

Bakrim fue condenado en 2003 a 15 aos por proselitismo y destrucciones de propiedades pblicas. El problema son los familiares, los vecinos, la sociedad en su conjunto, insiste. El majzen [entorno del rey] quiere saber todo lo que hacemos, pero ya no quiere impedirlo siempre que seamos cautos. Le preocupa tambin nuestra seguridad, que no nos agredan unos fanticos. Nacido en una familia numerosa de clase media alta, Al, que acaba de rebasar los 40 aos, tuvo una crisis religiosa en su adolescencia. El Dios del islam no me comprenda y con 16 aos acab declarndome ateo, recuerda. El islam, tal y como se interpreta actualmente, es una losa. Al entrar en la universidad un compaero me dej la Biblia. Encontr a un Dios que me aceptaba como era para despus cambiarme. Se convirti. Profundiz el conocimiento de su nueva religin a travs de un curso por correspondencia. Reciba cartas sin membretes de un pas rabe, en teora muy musulmn. Sabe que, para mi entorno, es ms aceptable que sea ateo que cristiano?, seala el pastor, casado y padre de dos hijos. Ser ateo es un error de juventud, ser cristiano es una traicin, asegura. No slo has rechazado el islam sino que te has pasado a la religin del colonizador francs. La gente se piensa que te has convertido porque as te ser ms fcil emigrar legalmente a Europa o vas a obtener a cambio algn provecho econmico. Un sondeo del instituto norteamericano PEW seala que el 61% de los marroques tienen una opinin negativa del cristianismo. Radouan Benchekroun, presidente del Consejo de los Oulemas (sabios religiosos) de Casablanca, contribuye a fomentar este criterio: Los evanglicos engaan a la gente, la atraen con dinero y con apoyo social. Propagan mentiras sobre el islam y los musulmanes, aade. Renegar de su religin es el mayor pecado que pueda cometer un musulmn. 146

Por eso, a medida que Al revelaba su nueva fe, fue perdiendo amigos. No fue fcil, rememora. Les peda que me juzgaran por mi comportamiento, no por mi eleccin religiosa. Algunos lo aceptaron e intentaron comprenderlo. Incluso entre mis 12 hermanos, tres se convirtieron. En la familia de Al, como en otras muchas, las primeras que dieron el paso fueron las mujeres. Ser cristianas es, para ellas, ser ms libres y ms iguales a los hombres, explica Abdelhak, otro pastor evanglico que ha fundado un club de amigos supuestamente fanticos de la informtica, tapadera para poder reunirse ms fcilmente con sus fieles. Abdelhak no tuvo que convertirse porque, recalca sacando pecho, tengo el privilegio de tener unos padres cristianos. Optaron por el protestantismo justo despus de la independencia, hace medio siglo. Los domingos y los das de fiesta los cristianos se dan cita, para rezar, en casas particulares, generalmente la de su pastor. Solemos ser entre 15 y 20, porque congregar a ms gente llamara la atencin, indica Al. Por eso en mi domicilio las entradas y las salidas son espaciadas. En el casco antiguo de la ciudad hay tambin un puado de artesanos cristianos que, como trabajan el domingo, oran al Seor los viernes. Los conversos no frecuentan las iglesias oficiales porque quieren crear la suya propia, rabe o berebere, o porque hacerlo pondra en apuros a prrocos y pastores extranjeros, a los que Rabat podra acusar de proselitismo. En Navidad algunos, sin embargo, no se aguantan y franquean la puerta del templo. La pareja de policas de guardia durante el culto ni se inmut y el pastor, que me conoce, me mir sorprendido mientras me sentaba entre los fieles, recuerda Abdelhak. Lo peor para los cristianos, segn coinciden todos los entrevistados, son el mes de ayuno del Ramadn y las fiestas musul147

manas. Aunque no comemos en plena calle durante Ramadn tampoco respetamos la abstinencia, ni celebramos el iftar [ruptura del ayuno], ni degollamos un cordero con motivo del Aid, subraya Al. Es entonces cuando los vecinos te miran como un bicho raro y te sientes de verdad diferente. Al lado de los pocos pastores reconocidos por las autoridades estn llegando a Marruecos estos ltimos aos otros muchos, como antao Gilberto Orellana, cuya actividad declarada, muchas veces cooperante, esconde su empeo misionero. La mayora son estadounidenses aunque en sus filas figuran tambin algunos latinoamericanos. La Administracin Bush les alienta y su Embajada en Rabat les brinda, incluso, un cierto amparo, afirma un diplomtico europeo acreditado en esa capital. Cuntos son? La prensa estima en 500 a los nuevos pastores, con frecuencia formados en tres universidades evanglicas de Estados Unidos, y esparcidos por todo el pas. La cifra no sorprende a las iglesias reconocidas. Su desembarco inquieta hasta el punto de que el Istiqlal (Independencia), la segunda fuerza parlamentaria, interpel, en mayo en ambas cmaras, al ministro de Asuntos Religiosos, Ahmed Taoufik sobre la ofensiva evanglica. El pueblo marroqu (...) exige medidas concretas para garantizar su seguridad espiritual, insista At Tajdid, rgano de los islamistas moderados. Taoufik ech balones fuera en su respuesta aunque su predecesor s envi una circular a los oulemas para que pusieran en guardia a la poblacin. Por esas fechas el Ministerio del Interior expuls tambin a un pastor surafricano, Dean Malan, de Marraquech. Pero aunque les incomoda el activismo evanglico, a las autoridades les resulta difcil ir ms lejos. A Rabat acuden importantes delegaciones de las iglesias evanglicas de Estados Unidos que se entrevistan con ministros. Se benefician de un trato 148

de favor porque nuestro majzen no ahorra esfuerzos para agradar a Bush, asegura el semanario independiente Le Journal.

Gran mayora de evanglicos

En su intervencin parlamentaria, Abdelhamid Aouad, del partido nacionalista Istiqlal, evalu en 40.000 a los marroques convertidos y advirti de que el objetivo evanglico era lograr que en 15 aos, el 10 por ciento de la poblacin fuese cristiana. La cifra es muy exagerada. Jean-Luc Blanc, presidente de la Iglesia Evanglica de Marruecos, la que goza de reconocimiento oficial, la rebaja a una horquilla de entre 800 y 1.000, de los que slo 200 seran catlicos. Es verdad que el nmero aumenta. Casi tocan a un pastor por converso, subraya. Los ms optimistas de los pastores evanglicos entrevistados calculan que sus fieles se elevan a 3.500, a los que hay que aadir otros 500 catlicos, anglicanos, etctera. Blanc establece dos categoras de conversos: Aquellos que intentan vincularse a iglesias tradicionales y que son gentes acomodadas, muchos de ellos profesores o pertenecientes a profesiones liberales. Los fundamentalistas cristianos predican ms bien entre las clases desfavorecidas y se aprovechan de su debilidad para convertirles, prosigue poniendo de relieve sus discrepancias con los misioneros anglosajones con los que apenas mantiene contacto. Este pastor francs, que recibe a periodistas marroques, les explica que ni l ni los dems pastores o sacerdotes extranjeros con estatuto oficial hacen proselitismo. Respetamos la ley, recalca. Pese a su prudencia acaba, de vez en cuando, perdiendo la pa149

ciencia cuando le preguntan si el militantismo evanglico supone un peligro para Marruecos. Mire, contest en una ocasin, la gran pregunta consiste ms bien en averiguar si la libertad religiosa es una amenaza para Marruecos. Blanc no responde a su pregunta pero s lo hace Al, pastor marroqu. Es una libertad bsica, pero la presin islamista hace que el Estado no se atreva a consagrarla en las leyes.

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