Antonio Esteban Agüero Poemas
Antonio Esteban Agüero Poemas
Antonio Esteban Agüero Poemas
III Parte
IV Parte
Yo quisiera los plsticos pinceles
y la marea musical del rgano
para pintar y describir el rbol
de la manera que lo ven mis ojos,
con la exacta figura que devuelven
los callados espejos del asombro.
Uno camina por sendero agreste
hacia la hora en que la luz de oro
inclnase rosada hacia poniente
V Parte
Ahora canto la Dicha que derramas
Algarrobo natal, Abuelo mo!
sobre la gente que a tu vera vive,
en todo tiempo, con calor o fro,
ora sea en la pausa del otoo,
ora en la fiesta del frutal esto.
La primera la Dicha de tu sombra,
clara limosna de perenne abrigo,
donde es grato sentarse en la maana
o por la tarde, con el mate amigo
que serena las olas de la frente,
alimenta la flor del optimismo,
nos ensea a vivir con esperanza
y nos vuelve cordiales y tranquilos.
Sombra del rbol, transparente sombra,
casi impalpable como un velo fino
o la leve caricia de la nube,
o la queja que fluye en el suspiro,
algo tan puro, delicado y manso
como el sueo de un pjaro dormido
o la entraa del agua en la vertiente
y cuyo elogio me estar prohibido
mientras yo sea nada ms que un hombre
y no posea un corazn de mirlo.
VI Parte
Padre y Seor del bosque.
Abuelo de barbas vegetales.
Algarrobo Natal. Torre del cielo.