Actas XVI Congreso
Actas XVI Congreso
Actas XVI Congreso
Editores
M Cristina Cardona Molt
Esther Chiner Sanz
Antonio V. Giner Gomis
Universidad de Alicante
Comit Organizador
Presidenta: D. M Cristina Cardona Molt
Vice-Presidente: D. Antonio V. Giner Gomis
Secretaria/Tesorera: D. Esther Chiner Sanz
Vocales:
D. Laura Bravo Cppola
D. Antoni V. Casasempere Satorres
D. Jos Marcos Gmez Puerta
D. Mara Josefa Hernndez Amors
D. Jos Antonio Hernndez Bravo
D. Juan Rafael Hernndez Bravo
D. Marcos Jess Iglesias Martnez
D. Mara I. Laguna Segovia
D. Elisa Teresa Lpez Ruiz
D. Sonia Lpez Daz-Villabella
D. Ins Lozano Cabezas
D. M Asuncin Menargues Andrs
D. Santiago Mengual Andrs
D. Gladys Merma Molina
D. Francisco Pastor Verd
D. Antonio A. Puentes Gaete
Propsitos de AIDIPE
Revisores
D. Antoni V. Casasempere Satorres
D. Jos Marcos Gmez Puerta
D. Mara Josefa Hernndez Amors
D. Jos Antonio Hernndez Bravo
D. Juan Rafael Hernndez Bravo
D. Sonia Lpez Daz-Villabella
D. Gladys Merma Molina
D. Francisco Pastor Verd
Patrocinadores
Congreso patrocinado por la Conselleria dEducaci, Cultura i Esport de la Generalitat
Valenciana, el Vicerrectorat de Cultura, Esport i Poltica Lingstica de la Universitat
dAlacant y el Convention Bureau del Excmo. Ayuntamiento de Alicante, con la colaboracin
de la Facultad de Educacin, Universidad de Alicante.
Los textos incluidos en este monogrfico son reflejo del trabajo profesional de los respectivos
autores responsables ltimos de la exactitud y precisin del contenido de las comunicaciones
presentadas. La informacin aqu contenida no refleja necesariamente la filosofa de la
Asociacin Interuniversitaria de Investigacin Pedaggica (AIDIPE).
978-84-695-8363-0
iii
Prefacio
Cada dos aos, en el Congreso bianual de la Asociacin Interuniversitaria de
Investigacin Pedaggica (AIDIPE), profesores, investigadores y profesionales de la
educacin procedentes de toda la geografa espaola y, desde 2011, de la comunidad
internacional, se renen para compartir ideas y experiencias y crear y/o reforzar relaciones
profesionales e institucionales ya existentes. En la edicin de 2013 del Congreso de AIDIPE
nos damos cita para reflexionar, debatir y compartir crculos de conocimiento terico,
competencial y afectivo acerca de la globalidad, pluralidad y respuesta educativa a la
diversidad.
Dada la relevancia del tema, AIDIPE se complace en promover su XVI Congreso
Nacional / II Internacional Modelos de Investigacin Educativa bajo el lema Investigacin e
Innovacin Educativa al Servicio de Instituciones y Comunidades Globales, Plurales y
Diversas con la colaboracin de la Facultad de Educacin de la Universidad de Alicante. La
globalizacin demanda instituciones nicas y, a la vez, diversas que preparen para vivir en un
mundo plural. El lema de este congreso brinda la oportunidad de explorar, analizar y
reflexionar acerca de la educacin que necesitamos para el siglo XXI: local y diversa, pero con
visin y perspectiva regional, nacional y global.
Los autores cuyos trabajos fueron aceptados y as lo decidieron han sido incluidos en
esta publicacin. La participacin ha sido elevada, as como tambin su calidad e inters
cientfico. Estamos convencidos de que encontrarn los manuscritos interesantes y tambin
tiles en mltiples sentidos.
Como editores de este Libro de Actas, queremos expresar nuestro ms sincero
agradecimiento a todos los autores firmantes de los trabajos, como tambin a todos los
profesionales que de un modo u otro nos han ayudado en los procesos de seleccin, revisin y
presentacin de los manuscritos (Comit Cientfico, revisores y coordinadores de mesa).
Asimismo, agradecemos al Comit Organizador su dedicacin y compromiso en la
organizacin y desarrollo del evento y al staff editorial del Gabinete de Imagen y
Comunicacin y del Taller Digital de la Universidad de Alicante su ayuda y colaboracin en
las fases de diseo, grabacin y reproduccin de este producto final.
A todas y todos, muchas gracias.
M Cristina Cardona Molt
Esther Chiner Sanz
Antonio V. Giner Gomis
978-84-695-8363-0
NDICE
Prefacio................................................................................................................................ iii
PARTE I
Identidad, Diversidad y Equidad en Educacin
Las identidades culturales y cvicas en los procesos de integracin de la juventud
magreb y latinoamericana en Catalua .............................................................................. 23
M. ngeles Marn, Ruth Vil y M. ngeles Pavn
Aprendizaje de la ciudadana activa: propuestas educativas............................................... 35
Teresa Aguado, Beln Ballesteros, Patricia Mata y Hctor Snchez-Melero
La tensin entre igualdad y diversidad en la escuela argentina segn El
Monitor de la Educacin (2004-2011) ................................................................................ 43
Facundo Nieto
La equidad educativa: evidencia terica y emprica disponible sobre su relacin
con la igualdad, la calidad y la excelencia .......................................................................... 52
Jos Snchez-Santamara
Investigacin participativa para la elaboracin de un mapa de espacios de
participacin ciudadana....................................................................................................... 61
Ins Gil-Jaurena y Sergio Lpez-Ronda
Resiliencia y xito escolar en el alumnado de secundaria de procedencia extranjera ........ 67
Mara Ins Massot, Jaume del Campo, M Paz Sandn y Angelina Snchez
Trayectoria del bullying homofbico en Chile ................................................................... 76
Juan R. Cornejo
La mediacin intercultural como agente articulador de las relaciones positivas entre
la familia de origen inmigrante y los centros educativos .................................................... 88
Antoni Casasempere
La segregacin escolar en institutos de educacin secundaria en las Islas Baleares .......... 95
Andrs Nadal y Paloma Llabata
978-84-695-8363-0
978-84-695-8363-0
PARTE II
Diagnstico, Orientacin y Atencin a la Diversidad
Addressing diversity in classrooms: Using progress monitoring data to make
instructional decisions ......................................................................................................... 191
Shaila Rao
Estrategias en el aula de atencin a la diversidad desde la perspectiva de la justicia
social.................................................................................................................................... 202
Cynthia Martnez y Nina Hidalgo
Importancia, uso y utilidad que el profesorado de educacin primaria atribuye a las
estrategias para la enseanza de la comprensin lectora..................................................... 210
Juan V. Albero
La atencin a la diversidad en la futura LOMCE................................................................ 218
Elisa T. Lpez
La diversidad desde el enfoque de los educadores que participan en el programa
Red Andaluza de Ecoescuelas............................................................................................. 225
Ligia I. Estrada
Conocimientos y opiniones en torno a las agencias de colocacin en Espaa.................... 234
Luis M. Almagro
Factores familiares implicados en la formacin y el acceso al empleo de las
personas con discapacidad intelectual................................................................................. 252
J. Marcos Gmez, M Cristina Cardona y Carmen Jimnez
Los programas de cualificacin profesional inicial: un estudio de casos ............................ 264
Beatriz Garca, M Teresa Pozo y M Cristina Martnez
Reception and support adults with handicap in vocational reconversion with mental
health problems ................................................................................................................... 274
Eduardo Elsegui, Dolores Casquero y Diego J. Luque
Adopcin y escuela: un nuevo reto educativo..................................................................... 281
Ana M Rosser
El diagnstico de la alta capacidad en la Comunidad Valenciana ...................................... 291
Ramn Garca
El vocabulario emocional como punto de partida para la educacin emocional ................ 301
Ricardo Morgado, Gema Granadilla, Marta Coronilla, Francisco J. Lozano, Alberto
Martnez y M Isabel Perea
978-84-695-8363-0
978-84-695-8363-0
978-84-695-8363-0
978-84-695-8363-0
978-84-695-8363-0
978-84-695-8363-0
978-84-695-8363-0
10
978-84-695-8363-0
11
978-84-695-8363-0
12
978-84-695-8363-0
13
Enfoques actuales de liderazgo y estilos de direccin escolar: revisin terica ................. 1143
Ingrid del Valle Garca y Marta Olmo
Estrategias de evaluacin alternativa para nios con discapacidad en aulas de
inclusin .............................................................................................................................. 1152
Belkys Torres
Anlisis de la competencia intercultural en alumnado de educacin primaria para la
mejora de su inclusin en el aula ........................................................................................ 1159
Jos A. Hernndez, Juan R. Hernndez, Mara del Valle de Moya y Ramn Czar
Mejora de la calidad de la enseanza con la inmersin de las NNTT en los centros
educativos andaluces........................................................................................................... 1166
M Dolores Daz y Jos I. Soto
Cul es el perfil competencial del alumnado universitario?: un estudio en la
Facultad de Ciencias de la Educacin de la U.S. ................................................................ 1173
M Rosario Gil
Evaluacin de competencias transversales mediante el uso de portafolio digital:
planificacin de la asignatura Teora y Prctica de la Investigacin Educativa del
Grado de Pedagoga en la Universidad de Barcelona ......................................................... 1179
Franciele Corti, Carolina Quirs y Robert-Gerau Valls
PARTE IV
Formacin del Profesorado y Desarrollo Profesional Globalmente Competente
Estudio sobre la motivacin y expectativas del alumnado de la Universidad de
Mlaga hacia el Mster de Secundaria................................................................................ 1190
Miguel A. Fernndez, Ana C. Mrquez y Esther Mena
El comportament de lestudiant com a element diferenciador en la millora de
leficincia i la qualitat de leducaci.................................................................................. 1199
Alfred Moncho
Insercin laboral de los licenciados en pedagoga de la Universidad Complutense
de Madrid (2006-2012): cmo, dnde y cunto tardan en colocarse los pedagogos .......... 1206
Covadonga Ruiz de Miguel y M Jos Garca de la Barrera
Campos intervinientes en la configuracin de la formacin docente permanente
para el nivel medio en la provincia de La Pampa, Argentina.............................................. 1214
Sonia G. Alzamora
978-84-695-8363-0
14
978-84-695-8363-0
15
978-84-695-8363-0
16
978-84-695-8363-0
17
978-84-695-8363-0
18
Efectos de la enseanza por investigacin guiada sobre los ciclos y simetras del
sol y el modelo Sol/Tierra sobre las actitudes de los futuros maestros de primaria............ 1612
Rubn Limiana, Rafael Colomer, M Asuncin Menargues y Joaqun Martnez
Validacin de un instrumento de medida para evaluar el impacto de los Sistemas de
Gestin Calidad en centros educativos................................................................................ 1621
Jess M. Rodrguez y M Jos Fernndez
Motivacin, preferencias metodolgicas, estrategias de aprendizaje y rendimiento
en el alumnado de educacin secundaria (PCPI, ESO, FP y Bachiller).............................. 1630
Carlos Sancho, Alfredo Pachs, Ester Albiar y Natividad Orellana
Competencias evaluativas del profesorado de educacin primaria: propuesta de
instrumento de autoevaluacin para los maestros y maestras de Chile............................... 1638
Carolina Quirs
Efecto de la enseanza problematizada de la astronoma diurna (ciclos y simetras
del movimiento del sol y el modelo Sol/Tierra) en los conocimientos de los futuros
maestros de primaria ........................................................................................................... 1647
M Asuncin Menargues, Rubn Limiana, Rafael Colomer y Joaqun Martnez
Validacin del diagnstico de necesidades en equipamientos ambientales mediante
procesos de triangulacin analtica ..................................................................................... 1657
Clemente Rodrguez y Ftima Poza
La formacin en las empresas lideradas por universitarias en Galicia
M Jos Mndez y M del Mar Sanjun ............................................................................. 1667
Anlisis de la formacin metodolgica de los estudiantes de Pedagoga de la
Universidad de Barcelona ................................................................................................... 1675
Mercedes Torrado, Franciele Corti y Marta Sabariego
Qu opinin tiene el alumnado de educacin primaria sobre sus propias
competencias? Diseo y validacin de un cuestionario para medir su percepcin
Antonia Ramrez, Carmen Corpas y M del Pilar Gutirrez ............................................... 1685
Diseo y validacin de un cuestionario sobre el desarrollo de competencias de
investigacin educativas...................................................................................................... 1695
Jos Snchez-Santamara y Sonia Morales
Una propuesta multidisciplinar en el rea de msica de la ESO: la formacin
corporal y su relacin con la motivacin del alumnado...................................................... 1704
Paloma Mora y Jos M. Pealver
978-84-695-8363-0
19
978-84-695-8363-0
PARTE I
Identidad, Diversidad y Equidad en Educacin
21
978-84-695-8363-0
23
Resumen
Presentamos un diagnstico en profundidad sobre el papel que juegan las identidades
culturales y cvicas en la integracin de la juventud magreb y latinoamericana en Catalua.
La metodologa combina un amplio estudio por encuesta a 3.830 jvenes, con 7 entrevistas a
agentes socioeducativos y 4 grupos de discusin con jvenes participantes en el estudio. Se
ha realizado un estudio descriptivo, pruebas de contraste de Chi-cuadrado y un anlisis de
clasificacin a travs de la tcnica de rboles de decisin. La juventud magreb tiene un
perfil diferente a la de origen latinoamericano, ponindose de relieve la importancia de la
ropa y de la lengua en su proceso de integracin. Entre los elementos que configuran la
identidad cvica destaca como fundamental para la integracin la lengua, junto con tener
amistades del lugar de residencia. Los jvenes magrebes ofrecen tambin un perfil
diferencial.
Descriptores: integracin juventud, identidad cultural, sentimiento de pertenencia cvica.
Abstract
We present a diagnosis in depth on the role that play the civic and cultural identities in the
integration of the Maghrebianand Latin-American youth in Catalonia. The methodology
combines an extensive study by survey to 3.830 youths, with 7 interviews to agents socioeducationals and 4 groups of discussion with young participants in the study. A descriptive
study has been carried out, tests of contrast of Chi-Square and an analysis of classification
through the technique of decision trees. The Maghrebian youth has a profile different from
that of origin Latin-American, there being emphasized the importance of the clothes and the
language in your process of integration. Among the elements that configure the civic identity
emphasizes as fundamental for the integration the language, along with having friendships of
the place of residence. The Maghrebian youths offer also a differential profile.
Keywords: integration youth, cultural identity, civic sense of belonging.
1
Esta comunicacin forma parte de un proyecto de investigaci nms amplio sobre el proceso de integracin de
la juventud extranjera de 14 a 18 aos de edad, en Catalua. Proyecto de investigacin subvencionado en la
convocatoria ARAFI 2010 de ayudas para incentivar la investigacin aplicada en materia de inmigracin en
Catalua financiada por la Direccin General para la Inmigracin y la Direccin General de Investigacin de la
Generalitat de Catalunya.
978-84-695-8363-0
24
Introduccin
Las migraciones y su impacto sobre sociedades golpeadas por el desempleo, plantea
un serio reto a la convivencia entre personas con identidades culturales diversas. La
integracin de los colectivos minoritarios y la cohesin social son metas importantes para las
sociedades plurales. Para lograr estas metas es preciso crear una sociedad con vnculos
sociales, econmicos, culturales y polticos fuertes para todos los ciudadanos (Alarcn, 2010;
Cachn, 2009; Goytisolo y Nar, 2000; Nar 2001; Marin, 2004). El encuentro entre culturas
que ofrece la sociedad multicultural es, sin duda, un abanico de oportunidades para el
desarrollo de identidades culturales ms complejas y ricas. La identidad cultural como
construccin social supone, para las personas y los grupos, ir configurando sus rasgos
identitarios a travs de mltiples y complejas identificaciones, mediante procesos dinmicos
de singularizacin y de identificacin (Marn, 2004, Bartolom y Marin, 2005).
En la presente investigacin se aborda la integracin desde un enfoque intercultural
de dilogo e intercambio en condiciones de reciprocidad. La integracin se configura como
un proceso bidireccional, voluntario y dinmico de acercamiento y empata recproco entre la
persona migrada y la sociedad de acogida que supone el reconocimiento de los valores de
cada grupo y la construccin de una identidad cvica comn (Palou, 2010). Una sociedad
donde al otro se le reconoce en su diferencia y en su igualdad para aportar y enriquecer al
conjunto social (Bilbeny, 2010; Samper, Moreno i Alcalde, 2006; Torres, 2002).
La integracin se basa en el derecho de todos los miembros que forman parte de una
sociedad de participar en la construccin de una sociedad formada por ciudadanos y
ciudadanas con los mismos derechos y deberes, de forma que la diversidad de orgenes, de
capacidades o de caractersticas sociales y culturales sea reconocida como un elemento comn
a toda la poblacin (Palaudrias, 2002). A pesar de ello, numerosas investigaciones realizadas
en territorio espaol ponen de relieve dos realidades: por una parte, se comprueba que la
convivencia de personas de procedencias culturales diferentes origina problemas y
dificultades y, por otra, se observa tambin que los colectivos de personas migradas tienen
muchos problemas a la hora de integrarse en la sociedad (Pumares, 1996; Martnez Veiga,
1997; Colectivo IO, 1992, 1994 i 1996; Gonzlez, 2002; Freixa, 2003; Etxebarria y
Elosegui, 2010).
La persona construye su "identidad cvica" estableciendo vnculos afectivos y
efectivos con los dems miembros de la comunidad en el ejercicio de su ciudadana. El
desarrollo del sentimiento de pertenencia a una comunidad poltica se hace mucho ms
complejo desde la realidad multicultural que vivimos. An reconociendo la oportunidad de la
heterogeneidad cultural para nuestro crecimiento como sociedad, es indudable que nuestro
sistema de relaciones se hace ms complejo cuando tienen que armonizarse diferentes
tradiciones, culturas, religiones, lengua, cdigos de comportamientos, etc. Y supone un reto
mayor para las personas, los colectivos y para las instituciones democrticas que deben
promoverla (Marn, 2002, 2005). La identidad cvica exige la participacin en la construccin
de proyectos que se reconocen como propios. Esta construccin colectiva no presupone, como
punto de partida, la existencia de una identidad cultural comn. Como seala Martiniello
(1998:102):
978-84-695-8363-0
25
La nocin de democracia multicultural que nos parece ms acertada supone, pues, un cuerpo
de ciudadanos activos con los mismos derechos y deberes, que comparten el mismo espacio
pblico y un proyecto democrtico comn, con respeto a la ley y a los procedimientos jurdicos
y polticos. Estos ciudadanos pueden tener diferentes identidades y prcticas culturales, tanto
pblicas como privadas. Estas opciones de identidad no afectan a su posicin en el orden
social, econmico y poltico.
978-84-695-8363-0
26
De dnde te sientes?
Catalua
Espaa
De mi pas de nacimiento
De aqu y de mi pas de nacimiento
De Catalua y Espaa
Lugar de Nacimiento
Catalunya
Espaa
Otrospases
%
%
%
843 24,4% 820 23,7% 111 3,2%
122 3,5% 436 12,6% 51
1,5%
19
5%
561 16,2%
2
1%
132 3,8%
102 3,0% 249 7,2%
4
,1%
978-84-695-8363-0
27
42%
Pas de origen
Latinoamericanos
34%
Otros
Magrebes
25%
35%
De aqu
Latinoamericanos
43%
Otros
63%
85%
39%
38%
34%
47%
27%
9%
34%
45%
31%
53%
60%
76%
32%
55%
43%
48%
53%
71%
25%
37%
54%
27%
20%
47%
20%
20%
33%
20%
13%
8%
41%
14%
19%
27%
17%
14%
66%
43%
28%
62%
50%
53%
73%
60%
60%
67%
60%
A mayor tiempo de residencia en Catalua, elementos del pas de origen como las
normas y conductas, la forma de ser de las personas, la comida, la ropa y la msica, pierden
importancia a favor de los elementos tpicos del pas de acogida.
El 60% de los jvenes extranjeros que hace menos de un ao que viven en Catalua
dan ms importancia a seguir las normas y conductas de su pas de origen, ante slo el 31%
de los jvenes que llevan ms tiempo (2=19'6, p=0'003, =0'05). stos son los que con
mayor frecuencia valoran la forma de ser de las personas de ambos contextos, mientras que
casi la mitad de los jvenes que llevan menos tiempo valoran ms la de su pas de origen
(2=20'1, p=0'002, =0'05). El 83% de los jvenes inmigrados hace menos de un ao optan
por la comida de su pas, frente al 67% C (2=17'2, p=0'009, =0'05). De forma muy similar,
casi la mitad de los jvenes recin inmigrados escogen la ropa de su pas de origen, cuando
slo el 16% del resto de extranjeros lo hace (2=53'3, p>0'000, =0'05). Finalmente, el 58%
978-84-695-8363-0
28
de los que viven aqu desde hace menos de 5 aos, prefieren la msica de su pas de origen,
proporcin mucho mayor al resto de jvenes extranjeros (2=42'2, p>0'000, =0'05).
La influencia del tiempo de residencia en la identificacin de la juventud con los
elementos culturales tambin lo sealan los profesionales entrevistados:
Necesitan tiempo para entender los nuevos referentes y dejarse influir. Al menos el primer ao
siguen aferrndose a lo que conocen. Durante el proceso de migracin han perdido
determinados procesos de socializacin que despus aqu les cuesta mucho(...) no han podido
construir con sus familias, con sus referentes educativos y buscan cosas conocidas que les dan
seguridad (profesora aula de acogida).
Tambin insisten que en la vivencia del duelo migratorio en muchos de estos jvenes se
encuentra el motivo de una construccin de la identidad determinada. Algn profesional
insiste en que los jvenes de procedencia extranjera son un colectivo muy poco uniforme, y
que variables como la edad de llegada y el tiempo que lleve en el pas de acogida son
fundamentales para entender los procesos de construccin de la identidad cultural.
La religin, las celebraciones populares, el arte y la tendencia a formar pareja son
elementos ms estables, dado que no ofrecen diferencias estadsticamente significativas en
funcin del tiempo de residencia en Catalua. Si analizamos estos datos segn el gnero, la
religin y las relaciones amorosas endogmicas son dos elementos bsicos en la identidad
cultural de las chicas extranjeras. Los profesionales entrevistados detectan diferencias, en
especial, con las jvenes de origen magreb. Una profesora comentaba en la entrevista
refirindose a chicas marroques:
Cuesta mucho que incorporen cambios cuando llegan a algunas edades y tan slo piensan en
casarse con alguien de su pas. En los grupos de discusin se refuerza esta idea, una chica
marroqu ni se plantea que se pueda casar con un chico de aqu, a lo mejor un chico para un
rato, despus para casar no, es diferente (Alumna de Marruecos-Centro Abierto Don Bosco).
Estos resultados se han obtenido mediante la tcnica de rboles de decisin, mediante el mtodo de crecimiento
CHAID exhaustivo, obteniendo datos coherentes con la estimacin de riesgo (0,148).
978-84-695-8363-0
29
cultura de origen. Segn los jvenes es necesario relacionarse con aquellos con los que se
identifican culturalmente. Existe un sentimiento de proteccin con el grupo de iguales y una
identificacin con los procesos similares que estn viviendo:
Es que pienso diferente y yo me relaciono con personas magrebes, porque tuve una amiga
espaola, pero siempre se burlaba de m, entonces desde all no quise tener ms amigos o
amigas espaoles, porque yo no saba hablar bien, entonces ella se burlaba y eso no me
gustaba. Entonces lo dej con ella y desde all siempre tengo amigas marroques (Alumna de
Marruecos- IES Estany de la Ricarda).
La identidad cvica
Para conocer la pertenencia cvica se les plante una pregunta de respuesta mltiple
para que sealaran de qu lugares se sentan ciudadanos o ciudadanas. De las respuestas se
desprende que el sentimiento de pertenencia cvica de los jvenes est vinculado
principalmente al lugar de residencia en la juventud autctona y al lugar de nacimiento en la
juventud de origen extranjero. El 71% de los jvenes nacidos en Catalua, se sienten
ciudadanos del lugar donde viven, frente al 37% de los extranjeros (2=335'6, p>0'000,
=0'05). El 65% de los jvenes extranjeros se sienten ciudadanos de su pas de nacimiento
(2=98'2, p>0'000, =0'05).
La pertenencia cvica de la juventud extranjera tambin presenta perfiles diferenciales
en funcin del tiempo de residencia en Catalua. Si hace ms de 10 aos que viven en
Catalua, tienen un sentimiento de pertenencia cvica vinculado con el lugar de residencia: el
69% frente al 33% de los jvenes que hace entre 2 y 5 aos que viven aqu (2=286'5,
p>0'000, =0'05). La pertenencia cvica de los jvenes, presenta elementos diferenciales en
funcin del lugar de origen de los jvenes extranjeros. Como se resume en la Tabla 3, los
jvenes nacidos en Latinoamrica son los que menos se sienten ciudadanos de Catalua
(2=8'25, p=0'016, =0'05) y se identifican con pertenencias ms globales como
Latinoamrica (2=16'15, p>0'000, =0'05).
Tabla 3
Sentimiento de pertenencia cvica de los jvenes extranjeros
Magrebes
De la ciudad, pueblo o barrio donde vivo
De Catalunya
De Espaa
Del lugar donde he nacido
De otros lugares (Europa, Latinoamrica, frica, etc.)
De ningn sitio
No lo s, no me lo he planteado
40%
39%
30%
64%
14%
3%
9%
Latinoamericanos
35%
29%
29%
69%
24%
2%
8%
Otros
36%
34%
34%
63%
12%
4%
8%
978-84-695-8363-0
30
77,1%
31,8%
53,6%
54,8%
SEGN EL LUGAR DE
NACIMIENTO
Catalunya
Resto de
Otros
Espaa
pases
81,2%
75,4%
65,1%
32,6%
29,4%
29,8%
54,4%
57,9%
50,7%
60,8%
41,3%
38,6%
Otros pases
Magreb
Latinoamrica
Otros
63%
32%
46%
27%
65%
27%
53%
46%
71%
30%
56%
50%
19,5%
19,1%
14,3%
21,1%
25%
19%
17%
23,1%
23,2%
24,6%
22,3%
24%
21%
21%
59,6%
61,4%
55,6%
54,6%
57%
55%
50%
Por otra parte, en la medida que esta lengua tambin es la lengua vehicular en las
instituciones socioeducativas, su aprendizaje es igualmente importante para poder continuar
con sus estudios y conseguir el xito deseado. En este sentido la gestin de la acogida, en
clave de esfuerzos y disposicin por parte de la poblacin autctona, es fundamental:
Y bueno, si ests estudiando pues tambin la forma de que te hablen los profesores, si te hablan
"ah, si tienes dudas pregntame y eso" esto tambin hace que te sientas mejor y que puedas
hablar y preguntar eintegrarte en clase, por ejemplo (Alumnado autctono-IES Estany de la
Ricarda).
La juventud magreb es la que menos valora las amistades del lugar de acogida
(2=6'89, p=0'032, =0'05) y sigue las normas y costumbres (2=38'3, p>0'000, =0'05) para
sentirse ciudadano. Y en cambio, son los que ms valoran la participacin en asociaciones
culturales, deportivas y de ocio del lugar (2=6'22, p=0'045, =0'05). Para los jvenes
978-84-695-8363-0
31
Estos resultados se han obtenido mediante la tcnica de rboles de decisin, con el mtodo de crecimiento
CHAID exhaustivo, obteniendo datos coherentes con la estimacin de riesgo (0,148).
978-84-695-8363-0
32
vinculacin cvica al nuevo pas de residencia puede pasar por varias etapas y adems no
existe una linealidad o una progresin directa entre estas etapas, en funcin de los aos de
residencia en el nuevo pas sino que el proceso de vinculacin puede estar asociado ms con
la experiencia vital de cada una de estas personas (Massot, 2003; Banks, 1997).
Entre los elementos que configuran esta pertenencia cvica destaca como fundamental
la lengua, elemento tambin clave para la integracin. Esto se ratifica en multitud de
investigaciones (Arroyo, 2010; Muoz, 2004, Ortega, 2010; Villarreal, 2009) que asumen el
proceso de integracin mucho ms rpido en la medida que los migrantes adquieren un mayor
nivel de competencia en la lengua del pas de acogida, as como en aquellas que sealan la
importancia de tener amistades de aqu (Sigun, 2003; Torrabadella y Tejero, 2005).
Referencias
Alarcn, A., et al. (2010). Joves dorigen immigrant a Catalunya. Necessitats i demandes.
Una aproximaci sociolgica. Barcelona: Collecci Estudis 27.
Arroyo, M. (2010). La lengua en la integracin del alumnado inmigrante. Estudio de las
aulas Aliso en la provincia de Segovia. (Tesis Doctoral). Universidad de Valladolid,
Segovia.
Banks, J. (1997). Educating citizen in a multicultural society. New York: Teachers Columbia
University.
Bartolom, M. y Marn, M.A. (2005). Las identidades cvicas y culturales. Ejes clave para la
construccin de una ciudadana intercultural. En S. Sacavino (Coord.), Identidades y
ciudadana intercultural. Desafos para la educacin. Brasil: Ro de Janeiro.
Publicacin en CD.
Berlanga, V., Rubio, M.J. y Vil, R. (2013). Cmo aplicar rboles de decisin en SPSS.
REIRE, Revista d'Innovaci i Recerca en Educaci, 6(1), 65-79.
Bilbeny, N. (2010). Qu vol dir integraci? Nouvinguts i establerts a les nacions europees.
Barcelona: La Magrana.
Cachn, L. (2009). En la Espaa inmigrante: entre la fragilidad de los inmigrantes y las
polticas de integracin. Papeles del CEIC, 45, 1-35.
Casas, J.M. y Casas, A. (1994). The acculturation process and implications for education and
services. En A.C. Matiella (Ed.), The Multicultural challenge in health education
(pp.23-49). Santa Cruz, CA: ETR Associates.
Casas, M. (2006, julio). Conceptes de les migracions: demigrants a immigrants i de la
integraci a la inclusi.Ponncia presentada a la XXI edici de la Universitat
Internacional de la Pau. Barcelona, SantCugat del Valls.
Colectivo IO (1996). La educacin intercultural a prueba. Hijos de inmigrantes marroques
en la escuela. Madrid: CIDE-MEC.
(1994). Marroquins a Catalunya. Barcelona: Institut Catal dEstudis Mediterranis.
978-84-695-8363-0
33
978-84-695-8363-0
34
Muoz, B. (2004). La enseanza y aprendizaje del espaol como segunda lengua: para
inmigrantes en contextos escolares. Aspectos metodolgicos. Educacin y futuro:
revista de investigacin aplicada y experiencias educativas, 11, 91-100.
Nar, S. (2001). La inmigracin explicada a mi hija. Barcelona: Plaza y Jans.
Ortega, L. (2010). La enseanza de la lengua en el proceso de integracin del inmigrante.
(Memoria de Maestra).Universidad de Jan, Jan.
Palaudrias, J. (2002). Escola i immigraci estrangera a Catalunya: la integraci escolar.
Papers,66, 199 -213.
Palou, B. (2010). La integraci de la joventut dorigen magreb a Catalunya. (Tesi Doctoral).
Universitat de Barcelona, Barcelona.
Pumares, P. (1996). La integracin de los inmigrantes marroques. Familias marroques en la
Comunidad de Madrid. Barcelona: Fundaci La Caixa.
Samper, S., Moreno, R. y Alcalde, R. (2006). Poltiques locals dintegraci a la provncia de
Barcelona. Actuacions dels serveis municipals davant de les demandes de la
poblacin estrangera. Barcelona: ICPS-CIL i Diputaci de Barcelona.
Sigun, M. (2003). Inmigracin y adolescencia. Los retos de la interculturalidad. Barcelona:
Paids.
Torrabadella, L. y Tejero, E. (2005). Pioners i pioneres. Trajectries biogrfiques de filles i
de famlies immigrades a Catalunya. Barcelona: Fundaci Jaume Bofill.
Torres, F. (2002). La integracin de los inmigrantes y algunos de los desafos que nos plantea.
En J. De Lucas y F. Torres (Eds.), Inmigrantes: cmo los tenemos? Algunos desafos
y (malas) respuestas (pp. 49-73). Madrid: Talasa.
Villarreal, F. (2009). Enseanza de la lengua a inmigrantes. Estudio de polticas de
integracin lingstica en tres pases europeos y retos para el caso espaol. Madrid:
Subdireccin de Informacin y publicaciones.
978-84-695-8363-0
35
Resumen
La comunicacin que presentamos se enmarca en el proyecto Aprendizaje de la ciudadana
activa. Discursos, experiencias y estrategias educativas. La finalidad del proyecto es la
formulacin de propuestas educativas para el aprendizaje de la ciudadana activa mediante
la identificacin y el anlisis de las prcticas, procesos y experiencias a travs de los cuales
se aprende a ser y actuar como ciudadano en sociedades democrticas. Con esta finalidad
nos proponemos avanzar en la comprensin del concepto de ciudadana partiendo de las
percepciones y experiencias de informantes significativos pertenecientes a grupos objeto. El
anlisis del discurso de los informantes que han participado en esta investigacin nos
permite establecer unos principios bsicos para orientar el desarrollo de propuestas
educativas en mbitos formales y no formales, a la vez que estimula nuevas preguntas que
tratan de favorecer la reflexin y debate en torno a la ciudadana.
Descriptores: ciudadana, participacin, cambio social, propuestas educativas.
Abstract
This paper is a result of the project Active citizenship learning. Discourses, experiences and
educational strategies. The aim of this project is to formulate educational proposals to
promote the active citizenship learning through the identification and analysis of practices,
processes and experiences that help to learn how to become and act as a citizen in democratic
societies. With this aim in mind we will try to deepen on the comprehension of the notion of
citizenship, starting from the perceptions and experiences of significant informants belonging
to target groups. The discourse analyses of the informants who have participated in this
research allows us to establish some basic principles that can guide the development of
educational proposals in formal and non-formal contexts. On the other hand, new questions
emerge encouraging reflection and dialogue about the citizenship.
Keywords: citizenship, participation, social change, educational proposals.
Introduccin
Nuestro proyecto proviene de una lnea de trabajo previa que entiende la ciudadana
desde su carcter activo y participativo. La investigacin en torno a la ciudadana activa la
define a travs de prcticas sociales en transformacin, sealando el carcter dinmico y
978-84-695-8363-0
36
relacional del concepto. Se considera sta como una forma colectiva de pertenencia activa a la
comunidad que implica el desarrollo de identidades y sentimientos de pertenencia e
implicacin (Benedicto y Morn, 2003). Este enfoque de ciudadana presenta una alternativa
al concepto de ciudadana tradicional entendido como asignacin de derechos en razn de la
pertenencia a un Estado-nacin. Se hace necesario buscar nuevas frmulas que reconozcan la
diversidad (Susn, 2008) y permitan avanzar en propuestas y alternativas que articulen una
nueva ciudadana (Moro, 2008).
La construccin de la ciudadana activa se presenta como un medio para el logro de la
inclusin y la cohesin social en sociedades democrticas. La emergencia y la complejidad
del concepto y la prctica ciudadana en un contexto de transformacin de los discursos y
prcticas relacionados con el ejercicio de la misma inciden en la necesidad de investigar sobre
los procesos de construccin de esta nueva ciudadana con el fin de identificar estrategias
educativas eficaces para su desarrollo y expansin.
La exploracin de los discursos y los procesos a travs de los que se define y pone en
juego la ciudadana con el fin de comprender cmo se estn construyendo sus significados y
prcticas constituye una lnea emergente de investigacin (Biesta, Lawy y Kelly, 2009; Bora
y Hausendorf, 2004; Hausendorf y Bora, 2006; Fairclough, Pardoe y Szerszynski, 2006;
Knight Abowitz y Harnish, 2006).
Siguiendo este enfoque de trabajo, la finalidad del proyecto es la formulacin de
estrategias eficaces para el aprendizaje de la ciudadana activa mediante la identificacin y el
anlisis de las prcticas, procesos y experiencias a travs de los cuales se aprende a ser y
actuar como ciudadano en sociedades democrticas. Con esta finalidad nos proponemos
avanzar en la comprensin del concepto de ciudadana partiendo de las percepciones y
experiencias de informantes significativos pertenecientes a grupos objeto, as como construir
una red participativa para el anlisis, intercambio y sistematizacin de experiencias en torno
al aprendizaje de la ciudadana activa.
Mtodo
Nuestro proyecto proviene de una lnea de trabajo previa que entiende la ciudadana
desde su carcter activo y participativo. A partir de este enfoque general, nuestro inters en
este proyecto es profundizar en los discursos y experiencias subjetivas de informantes para
conocer los procesos de aprendizaje implicados en el ejercicio de la ciudadana activa y
derivar propuestas formativas de inters en el mbito socioeducativo. La metodologa
propuesta trata de abrir espacios de colaboracin con los y las informantes en el proceso de
recogida y anlisis de discursos, con el fin de construir un significado compartido en torno al
aprendizaje de la ciudadana activa. Para ello se ha previsto construir una red participativa que
facilite el intercambio y la colaboracin en tareas de anlisis.
El proyecto plantea una primera parte de trabajo de campo con carcter descriptivo, en
la que se pretende establecer un marco general sobre cmo se entiende la ciudadana activa en
distintos colectivos identificados como relevantes en la conceptualizacin del trmino. Para
ello, hemos llevado a cabo entrevistas con informantes que pertenecen a distintos mbitos
sociales y profesionales significativos para el ejercicio de la ciudadana:
978-84-695-8363-0
37
978-84-695-8363-0
38
978-84-695-8363-0
39
978-84-695-8363-0
40
Fuera de la escuela sera interesante que los distintos agentes sociales se concienciaran
de su papel educativo en cuanto al ejercicio de ciudadana se refiere. Tanto las instituciones
pblicas y privadas deberan ser ejemplos de democracia y pluralidad, de justicia y
solidaridad. De igual manera los medios de comunicacin desarrollan una educacin informal
y trasmisin de valores que deberan revisarse para que dichos valores potenciaran la
convivencia, la justicia y la solidaridad y dems valores prosociales. No siendo as en la
mayora de los casos otras figuras se ven en la tesitura de compensar esta situacin
convirtindose en figuras de referencia para el aprendizaje del ejercicio ciudadano. Nos
estamos refiriendo a la familia por un lado y los movimientos sociales por otro.
La familia juega un papel fundamental en el aprendizaje de la prctica ciudadana,
como sabemos, en ella se desarrollan los componentes afectivos, de solidaridad y respeto que
forman parte de esta concepcin crtica de la ciudadana. Adems, la familia es un espacio
donde se puede aprender la jerarquizacin de las relaciones en base a criterios arbitrarios
(edad, gnero, etc.) o donde se puede aprender el ejercicio de liderazgos responsables basados
en la igualdad, el respeto, el cuidado y la ayuda mutua. En la sociedad en la que vivimos la
familia tiene un papel fundamental en el desarrollo de las futuras y futuros ciudadanos y
ciudadanas, y as nos lo han reflejado los y las informantes.
En cuanto a los movimientos sociales, son por s mismos, y en la mayora de los casos,
la punta de lanza del ejercicio ciudadano crtico, participativo y trasformador, por ello son
modelos excepcionales para aprender esta prctica ciudadana. Ya hemos planteado que las
instituciones escolares se sirvan de los movimientos sociales como modelos y lugares de
experimentacin democrtica para su alumnado Ahora planteamos que los propios
movimientos sociales tomen la iniciativa de divulgar su experiencia ciudadana. No hablamos
de la divulgacin de sus actividades y sus finalidades, sino de actividades de formacin en la
prctica ciudadana que ellos realizan independientemente de sus objetivos concretos.
Hablamos de difundir su experiencia en el ejercicio de la ciudadana crtica, participativa y
transformadora.
Por ltimo destacamos una figura que est en una posicin privilegiada para facilitar y
promover el aprendizaje de la prctica ciudadana. Nos referimos al educador y educadora
social. No siendo, sin embargo, la nica figura que debera cargar con el peso del aprendizaje
de la prctica ciudadana como se desprende de los prrafos anteriores, es sin duda una figura
privilegiada por situarse como puente entre distintos agentes sociales. Adems el desarrollo
de aptitudes y actitudes prosociales es uno de sus mbitos de actuacin. Esto implica que las
personas profesionales de la educacin social deben ser as mismo ciudadanos y ciudadanas
crticas, participativas y transformadoras, en continuo cuestionamiento profesional en
bsqueda de la igualdad, la solidaridad y la justicia social. Aprendiendo de las personas que le
rodean y potenciando la educacin para la ciudadana en todas sus reas de intervencin, de
forma horizontal, interdisciplinar y creativa.
Dicho as, parece que estuviramos hablando de autnticos superhroes y
superheronas pero en realidad lo anterior se resume en que su prctica educadora debe ser
coherente, resaltando su posicin mediadora entre distintos agentes. Recordemos que la
ciudadana se aprende en relacin con diversidad de personas, el educador y educadora es
simplemente un potenciador y facilitador de estas relaciones, son estas relaciones las que
ensean el ejercicio de la ciudadana crtica, participativa y transformadora.
978-84-695-8363-0
41
Otros profesionales que pueden jugar un papel clave y mediador en este aprendizaje
son los orientadores (tanto en el contexto escolar como fuera del mismo) como asesores de
procesos y los mediadores sociales.
Pero adems conviene combinar no slo instituciones y profesionales sino edades y
roles (carcter intergeneracional), que generen situaciones de descontrol, de conflicto y por
eso de mayor aprendizaje, junto al trabajo de integracin, reflexin e internalizacin que se
convierta en proyectos de accin.
Para terminar, y puesto que hemos hablado de quines las distintas instituciones y
agentes sociales en relacin y del dnde cualquier espacio de convivencia , nos quedara
comentar el cundo. Aunque es de prever que consideramos el aprendizaje de la prctica
ciudadana un aprendizaje que se desarrolla a lo largo de toda la vida, desde la primera
infancia, como ya, dijimos hasta la muerte. Ya que en un mundo en continuo y acelerado
cambio el aprendizaje continuo se hace imprescindible para ejercer la ciudadana crtica,
participativa y transformadora a lo largo del tiempo.
Discusin
En esta discusin final, queremos proponer algunas cuestiones que han ido
emergiendo a lo largo de las discusiones, entrevistas, lecturas y presentaciones llevadas a
cabo por el grupo de investigacin. Algunas se han planteado en al grupo CIUDADANAS en
facebook y twiter y les invitamos a participar en estos espacios. Tambin son cuestiones que
se
han
reflejado
en
el
vdeo
elaborado
como
parte
del
trabajo
(http://www.canaluned.com/#frontaleID=F_RC§ionID=S_TELUNE&videoID=11071 ).
Son muchas, no se pretende que se contesten a todas, simplemente que sirven para la
reflexin y , quiz, para el debate:
-
978-84-695-8363-0
42
Biesta, G., Lawy, R. y Kelly, N. (2009). Understanding young peoples citizenship learning in
everyday life: the role of contexs, relationships and dispositions. Education,
Citizenship and Social Justice, 4(1), 5-24.
Bora, A. y Hausendorf, H. (2004). PARADYS, Participation and dynamics of social
positioning. Final report to the European Commission. Disponible en:
http://wwwedit.uni-bielefeld.de/iwt/personen/bora/Projekte/PARADYS/final-reportupdate.pdf
Fairclough, N., Pardoe, S. y Szerszynski, B. (2006). Critical discourse analysis and
citizenship. En H. Hausendorf y A. Bora (Eds.), Analysing citizenship talk (pp. 98123). Amsterdam /Philadelphia: John Benjamins Publishing Company
Hausendorf, H. y Bora, A. (2006). Communicating citizenship and social positioning. En H.
Hausendorf y A. Bora (Eds.), Analysing citizenship talk (pp. 23-49). Amsterdam
/Philadelphia: John Benjamins Publishing Company.
Knight Abowitz, K. y Harnish, J. (2006). Contemporary discourses of citizenship. Review of
Educational Research, 76(4), 653690.
Susn, R. (2008). Ciudadana. En A. Garca Inda y C. Marcuello (Coords.), Conceptos para
pensar el siglo XXI (pp. 25-54). Madrid: Catarata
Moro, G. (2008). La evaluacin de los ciudadanos de la participacin pblica. En J. M.
Burgos (Dir.), Evaluacin de la participacin pblica en la elaboracin de polticas
pblicas (pp. 121-140). Madrid: Instituto Nacional de Administracin Pblica / OCDE
978-84-695-8363-0
43
Resumen
El monitor de la educacin es una publicacin peridica editada por el Ministerio de
Educacin de la Nacin Argentina, dirigida al profesorado y distribuida en todas las escuelas
del pas. Se trata de una revista oficial emblemtica en la historia de la educacin argentina,
fundada en 1881 y publicada con interrupciones en diferentes perodos. Su quinta poca, la
ltima hasta hoy, se extiende entre 2004 y 2011. Nuestro trabajo se propone examinar los
dossiers de los veintiocho nmeros de El Monitor, quinta poca, focalizando especialmente el
tratamiento de uno de sus ncleos temticos ms recurrentes: la dicotoma igualdad versus
diversidad. Al respecto, nos interesa abordar especialmente el modo en que, a travs del
dossier de una publicacin oficial, el Estado nacional ha comunicado a los docentes las
particularidades que la tensin entre igualdad y diversidad asume en el nuevo siglo en el
contexto especficamente argentino.
Descriptores: Educacin argentina, Revistas educativas, Igualdad, Diversidad, Inclusin.
Abstract
El monitor de la educacin is a magazine published by the Ministry of Education of
Argentina, aimed at teachers and distributed in every school in the country. Its an iconic
magazine in the history of education in Argentina, which was created in 1881 and published
in different periods with some interruptions. The last period so far (the 5th one) goes from
2004 up to 2011. Our piece proposes to analyze the articles of the twenty-eight issues of El
monitor published during its 5th period, especially focusing on the treatment of one of its most
recurrent topics: the dichotomy between equality and diversity. On that subject, we are
interested in focusing how the state has communicated to teachers the particularities of the
tension between equality and diversity in Argentina at the beginning of the new century.
Key words: Argentinian education, Educational magazines, Equality, Diversity, Inclusion.
Introduccin
Nuestro trabajo se propone examinar los dossiers de la revista El monitor de la
educacin comn, quinta poca, publicacin peridica editada por el Ministerio de Educacin
de la Nacin Argentina, dirigida al profesorado y distribuida gratuitamente en todas las
escuelas del pas. Se trata de una revista oficial emblemtica en la historia de la educacin
argentina, fundada en 1881 y publicada con interrupciones en diferentes momentos. Su quinta
poca, la ltima hasta hoy, se extiende entre 2004 y 2011. El objetivo principal de nuestro
978-84-695-8363-0
44
trabajo consiste en determinar el modo en que, a travs del dossier de una publicacin oficial,
el Estado nacional ha comunicado a los docentes las particularidades que la tensin entre
igualdad y diversidad asume en el nuevo siglo en el contexto especficamente argentino.
Mtodo
Hemos adoptado las perspectivas del anlisis de contenido (Bardin, 1996) y de la
teora de la enunciacin (Filinich, 1998). Las herramientas de ambos enfoques brindan la
posibilidad de interrogar los textos formulando hiptesis relativas a la instancia de
enunciacin, es decir, al enunciador y al contexto en que los discursos son producidos.
El objeto de anlisis est conformado por los artculos que encabezan los dossiers de
los veintiocho nmeros de El monitor publicados entre 2004 y 2011. Estos artculos, que
ocupan un lugar destacado en las pginas centrales de la revista, pertenecen a dos autoras:
Ins Dussel, una de las directoras de la revista, y Myriam Southwell, colaboradora
permanente; es posible deducir, por lo tanto, que Dussel y Southwell son quienes coordinan
los dossiers seleccionando tanto las temticas como convocando a los autores que publican
all sus textos4. Por la posicin de las autoras dentro de la revista y por la ubicacin de sus
artculos dentro de la seccin, puede afirmarse que los artculos de Dussel y Southwell son los
que establecen la orientacin terico-ideolgica de la publicacin. Nuestro anlisis se ha
centrado particularmente en el tratamiento de uno de los ncleos temticos ms recurrentes: la
dicotoma igualdad versus diversidad.
Resultados
Los resultados del anlisis del material pueden desagregarse en tres ncleos temticos
principales: el diseo de un relato histrico, la tensin entre los conceptos de igualdad y
diversidad y la construccin de la idea de lo comn como instancia superadora. A
continuacin describimos cada uno de estos tres ncleos.
El diseo de un relato histrico
A lo largo de los veintiocho nmeros, el conjunto de artculos disea una historia de la
educacin en la Argentina. En verdad podra decirse que los dossiers intentan
permanentemente definir cul es la escuela que debera construirse en el presente y para eso
buscan en el pasado diferentes modelos educativos o modelos de escuela, algunos de
cuyos rasgos se rescatan o bien se desechan para pensar la escuela actual. De este modo, los
rasgos de la educacin durante el perodo 2003-2011 se colocan en una relacin de contraste
con el pasado: desde el presente se construye una historia que, en ltima instancia, es utilizada
para hablar del presente. Son fundamentalmente dos los pasados elegidos: por un lado, un
pasado reciente, constituido por la escuela de los aos noventa; por otro lado, un pasado ms
4
Se exceptan cuatro dossiers, que no incluyen artculos de ninguna de las dos autoras: se trata de los
correspondientes a los nmeros 6 (dedicado al aniversario de los treinta aos del golpe de Estado de 1976), 11
(sobre educacin sexual), 15 (sobre el balance de los cuatro aos de gestin del ministro Filmus) y 16 (sobre la
enseanza de las ciencias naturales). Tanto Dussel (Ph.D. por la Universidad de Wisconsin-Madison, EE.UU.)
como Sothwell (Ph.D. por la Universidad de Essex, Inglaterra) son reconocidas especialistas en educacin con
una importante trayectoria en la investigacin y la docencia universitaria en la Argentina y en el exterior. Ambas
se desempearon como coordinadoras del rea de Educacin de la Facultad Latinoamericana de Ciencias
Sociales (FLACSO) y se han abocado al estudio de problemticas vinculadas con la historia, la teora y la
poltica educacional.
978-84-695-8363-0
45
remoto que abarca la escuela de las ltimas dcadas del siglo XIX y las primeras del siglo
XX.
El pasado reciente de la educacin argentina est constituido por la dcada del
noventa. Para los dossiers, esos aos han significado la brutal ruptura de un imaginario
republicano e igualador; si bien se reconoce que diferentes formas de la desigualdad
socioeconmica venan manifestndose desde tiempo atrs, el proceso de segregacin social
se profundiz entonces de tal modo que el desgarramiento del tejido social se habra
producido no slo en el plano material, sino tambin en el nivel simblico: fue entonces
cuando la desigualdad y la segregacin comenzaron a considerarse como legtimas
consecuencias de los procesos de modernizacin. Los discursos de finales del siglo XX sobre
la educacin advierten los dossiers se subordinaron tanto a la racionalidad de las polticas
econmicas como a las propuestas de organismos internacionales. As, cualquier concepto
que en los aos noventa implicara la construccin de un colectivo social vinculado con la
escuela comunidad, repblica, bien comn fue indefectiblemente desplazado por visiones
individualistas y particularistas de los sujetos. Los derechos ciudadanos y polticos
comenzaron a entenderse en trminos de derechos de consumidores de bienes pblicos y
privados. En cuanto a quienes quedaron excluidos del ejercicio del consumo material, la
escuela de los noventa les ofreci un espacio de contencin, es decir, un lugar de retencin
que provea alimentos, vestimenta, medicinas y asistencia afectiva, mientras enseaba a los
sujetos a incorporar la relacin asimtrica que los obligaba a permanecer indefinidamente en
ese rol de inferioridad y desvalimiento.
El segundo perodo histrico que construyen los artculos de los dossiers, un pasado
ms lejano que se ubica aproximadamente entre 1880 y 1930, corresponde a una poca en la
historia de la educacin a la que se alude a travs de diferentes formas: el perodo de
consolidacin de la escuela argentina moderna, la escuela sarmientina, el viejo modelo
normalista5, etc. Al igual que la escuela de los aos noventa, este modelo de escuela tambin
se evala como indeseable: para los dossiers, la escuela normalista fue una institucin de
rasgos autoritarios que, en relacin con los docentes, prescribi con exactitud el desarrollo
metodolgico de la enseanza; en relacin con los saberes, estableci contenidos universales
atravesados por una fuerte inflexin moralista y absolutamente ajenos al mundo exterior a la
escuela (el afuera constitua una fuente de amenaza para la cultura escolar); en relacin con
los alumnos, supo colocarlos en un lugar de absoluta subordinacin y los consider como
sujetos incompletos a quienes era necesario moralizar a travs de un eficaz dispositivo
patritico e higienista. Pero el rasgo negativo en el que ms insisten los artculos consiste en
que el modelo normalista entendi la igualdad en trminos de homogeneizacin: en su afn de
5
978-84-695-8363-0
46
imponer una igualacin de los sujetos, la escuela excluy toda manifestacin cultural que
quedara por fuera de los parmetros de la igualacin considerada correcta. En una poca de
llegada masiva de extranjeros al pas, la escuela oblig a someterse a un mismo e idntico
conjunto de elementos culturales (disciplinas, contenidos, rituales, smbolos, pautas de
comportamiento) a todos los alumnos independientemente de sus universos culturales de
procedencia. En este sentido, la escuela pblica argentina de comienzos del siglo XX excluy
y menospreci las culturas, los valores y las tradiciones de quienes eran portadores de
elementos potencialmente desestabilizadores fundamentalmente gauchos, indgenas e
inmigrantes de aquello que se consideraba el ideal de uniformidad denominado identidad
nacional.
Tanto en el pasado de los aos noventa como en el correspondiente a la consolidacin
de la escuela moderna a comienzos del siglo XX, las autoras encuentran un repertorio de
elementos sumamente hostiles. La escuela del presente, entonces, deber observar con
atencin esos dos modelos histricos para evitar repetirlos.
La tensin entre los conceptos de igualdad y diversidad
Pese a que el viejo modelo normalista ya no es practicable ni deseable (Dussel &
Southwell, 2010: 26), hay un rasgo que merece que se lo recuerde una y otra vez a lo largo de
los diferentes nmeros de El Monitor. Aun en su autoritaria matriz homogeneizadora, la
escuela de comienzos del siglo XX a diferencia de la escuela de los noventa que tiende a ser
condenada sin matices merece rescatarse porque consegua algo que en el presente se ha
perdido: conformar ciudadanos letrados que, ms all de sus diferencias socioculturales, se
sintieran parte de una misma comunidad, es decir, conformaran una cultura y una ciudadana
comn. En efecto, para decirlo sin ambages: la escuela moderna fue tan autoritaria como
igualadora. Por una parte, logr sentar en el mismo banco de escuela a los pobres y a los
ricos, a los hijos de inmigrantes y a los nativos, a nias y a nios (Dussel & Southwell,
2006)6 y, por otra parte, instituy exitosamente la idea de lo pblico, es decir, la idea de que
existe un conjunto de elementos culturales y cvicos comunes a todos los sujetos, que se
encuentran por encima de los deseos y las necesidades individuales, de modo que las
particularidades se habran fundido en una sntesis colectiva ms general, ms inclusiva y
menos sujeta al inters privado. Este es uno de los principales ncleos temticos que recorren
las pginas de El Monitor y que constituye uno de los dilemas que los dossiers persiguen casi
obsesivamente: la dicotoma igualdad versus diversidad.
La indagacin en el modelo escolar normalista parece responder a la necesidad de
resolver un interrogante que en el presente resulta crucial para la educacin en la Argentina:
cmo construir una escuela que, al igual que la del modelo normalista, establezca un
horizonte cultural comn que incluya a todos los individuos, pero que, a diferencia de aquel
modelo, no avasalle las diferencias sino que, por el contrario, posibilite las manifestaciones
propias de la diversidad? Dicho de otro modo: cmo propiciar el desarrollo de la pluralidad
de los elementos culturales ms genuinos de los sujetos que asisten a la escuela, sin que esto
signifique clausurar la posibilidad de una construccin colectiva ms abarcadora y una
configuracin cultural comn?
6
Hemos consultado los veintiocho nmeros de la quinta poca de El Monitor de la Educacin en su sitio web:
www.me.gov.ar/monitor. A diferencia de los nmeros 17 a 28, que aparecen en formato pdf, los nmeros 1 a 16
se incluyen all en formato html y a cada artculo se accede a travs de un enlace; por lo tanto, no es posible
establecer el nmero de pgina correspondiente a los fragmentos que hemos extrado de los diecisis primeros
nmeros; en esos casos slo indicamos el nmero de revista y su fecha de publicacin.
978-84-695-8363-0
47
Tal como reconocen los artculos, la tensin entre igualdad y diversidad no constituye
una problemtica exclusiva de la educacin en la Argentina. Sin embargo, el dossier advierte
que en nuestro pas esta problemtica presenta una particularidad:
en otros pases, las propuestas del multiculturalismo y el reconocimiento
de la pluralidad cultural emergieron en situaciones de auge de movimientos
de derechos civiles, que pugnaban por superar experiencias de marginacin
a minoras tnicas, nacionales o religiosas. La diversidad tuvo en esos casos
el inmenso valor de afirmar poltica y culturalmente los derechos de las
minoras. En el escenario de una Argentina en creciente empobrecimiento,
en cambio, la diversidad fue vinculndose a nuevos sentidos. La
diversidad es leda, a veces, como un indicador de extrema pobreza o de
discapacidad manifiesta; lejos de ser un valor afirmativo sobre el que lo
enuncia, parece referir a una desigualdad total sobre la que hay poco por
hacer (Dussel & Southwell, 2004).
El problema de la diversidad adquiere otra dimensin cuando aquello que queda
designado bajo ese nombre se asemeja ms a las formas de la exclusin socioeconmica que a
las diferencias culturales. En este sentido, el dossier advierte que los afectados por la
exclusin que determina bajos niveles de permanencia en el sistema educativo no son los
jvenes que perteneceran a configuraciones identitarias ajenas a un patrn homogeneizador
(las nias musulmanas impedidas de usar velo en la escuela francesa, por ejemplo), sino
aquellos jvenes que tradicionalmente no asistan a la escuela secundaria y que, por lo tanto,
son portadores de problemticas que desafan la gramtica de una escuela que no estaba
preparada para recibirlos:
Los jvenes ms problemticos son los recin llegados a las instituciones
educativas, los ms pobres, los que tienen menos internalizadas las formas
de ser alumno o que tienen pautas de crianza menos familiares para
quienes ya estamos en las escuelas desde hace varias generaciones. Esos
recin llegados cargan ms frustraciones y resentimientos por la exclusin y
la marginacin que padecen; digamos que no es fcil crecer en un mundo
que estimula un consumo sin lmite y a la par distribuye muy desigualmente
la posibilidad material de acceder a l (Dussel & Southwell, 2011: 26).
Entonces, en un contexto de niveles inusitados de pobreza, marginacin y desempleo,
altos ndices de desnutricin infantil, jvenes insertos en el mercado laboral formal o informal
o afectados por la problemtica de la maternidad y la paternidad precoz, la tensin entre
igualdad y diversidad tiende a resolverse a favor del primero de los trminos:
La igualdad debera empezar a pensarse como una igualdad compleja, como
una igualdad que habilita y valora las diferencias que cada uno porta como
ser humano, sin por eso convalidar la desigualdad y la injusticia (Dussel &
Southwell, 2004).
El Monitor se pronuncia decididamente a favor de la reconstruccin escolar de un
espacio comn y de una nocin de lo pblico que durante los aos noventa se haba
fragmentado en diversidades particulares. La revista apuesta a la rearticulacin de las
particularidades en una construccin colectiva que las incluya y las exceda: una escuela
978-84-695-8363-0
48
978-84-695-8363-0
49
maestro o al profesor de que, pese a la persistencia de problemas sociales que imponen lmites
considerables a la intervencin pedaggica, no debe cejar en su tarea, desarrollada muchas
veces en condiciones adversas? Cules son los argumentos con los cuales se demuestra que
el inicio de una nueva etapa en la educacin argentina no es slo un artificio discursivo, sino
que se trata de un conjunto de transformaciones reales con las cuales el docente debe
contribuir, aun cuando la pobreza, la desigualdad y la marginacin atenten contra su labor?
Bsicamente nos detendremos en la principal estrategia conceptual: la del concepto de
vulnerabilidad humana7.
La estrategia del concepto de vulnerabilidad humana, tendiente a atenuar los efectos
paralizadores que el obstculo de la pobreza puede producir para la accin docente, consiste
en que, aun cuando la revista no eluda de ningn modo el reconocimiento de la pauperizacin
de la sociedad y, en particular, de la poblacin de nios y jvenes que asisten a las escuelas, la
problemtica de la carencia material es equiparada frecuentemente con necesidades no
materiales o eventuales acontecimientos que responden al orden de la fatalidad. La pobreza se
coloca as en un nivel de equivalencia respecto de conflictos tales como traumas, accidentes,
problemas vinculares, enfermedades, muertes, delitos, etc.:
No son pocas las veces en que nos enfrentamos con el dolor en la escuela.
Un alumno o alumna que se accidenta, una enfermedad, la prdida de un ser
querido, las catstrofes climticas, los eventos polticos, o el dolor ms
persistente y duradero del hambre y la marginacin social, son situaciones
que nos confrontan, en distinta magnitud, con nuestros propios lmites como
educadores, el valor de nuestra tarea y la posibilidad de seguir apostando al
da a da de la enseanza []. La experiencia del dolor es algo que
compartimos todos los seres humanos, aun cuando cada uno lo viva a su
manera. Desde el primer golpe cuando se sale del tero materno, y del grito
que demuestra la vida, los humanos tenemos una convivencia diaria con el
sufrimiento. Como dijimos, hay dolores de distinto tipo, ms fuertes o ms
dbiles, ms momentneos o ms permanentes, pero en cualquier caso, los
padecimientos nos atraviesan ms temprano o ms tarde, y tenemos que
aprender a vivir con ellos. Vivir con ellos puede implicar, entre otras
cosas, superarlos si es que se puede, o tolerarlos y aceptarlos si no podemos
cambiar las condiciones que nos llevaron al sufrimiento (Dussel &
Southwell, 2007).
Si bien se reconocen diferencias de intensidad y de evitabilidad, los peligros
de cualquier ndole se funden en la caracterstica comn de la vulnerabilidad, rasgo
antropolgicamente universal, igualador y transclasista. Y dado que en todos los
tiempos y en todas las sociedades los seres humanos han experimentado la
vulnerabilidad de un modo u otro, el dolor que debe enfrentar la escuela de
comienzos del siglo XXI en la Argentina no sera, en esencia, diferente del dolor que
escuelas de otros tiempos y de otras sociedades han debido enfrentar a su turno. Las
estrategias para enfrentar el dolor, por lo tanto, son similares y estn siempre a
mano de las escuelas:
Hemos observado otras dos estrategias conceptuales argumentativas (las de los conceptos del cuidado del
otro y de responsabilidad docente) que omitimos aqu por razones de espacio.
978-84-695-8363-0
50
Lo que ensean los casos que mencionamos y que nos presentan las notas
incluidas en este dossier, es que no da lo mismo no hacer nada que hacer
algo; y que ese algo que propone la escuela implica movilizar recursos,
orientar acciones, y retomar la iniciativa en la accin escolar. Qu recursos
tienen a mano las escuelas? Son las redes sociales, los saberes acumulados,
las personalidades de los actores, o la posibilidad de la jurisdiccin de
ayudar profesionalmente, las que definen esos recursos. Habra que tratar de
que esas redes sociales, esos saberes, esos reflejos que aparecen en ciertas
situaciones, estn ms disponibles para todos. Quizs sea tiempo de darles
ms entidad, y de proponer una discusin y una reflexin a nivel del sistema
educativo acerca de estas temticas (ibd.).
Mecanismos de intervencin que se extienden desde el dilogo en la escuela que
habilite la palabra dolorida hasta redes sociales a mano de las escuelas constituyen
recursos que, por un lado, colocan a los sujetos en redes vinculares simtricas e igualitarias y,
por otro lado, les otorgan autonoma respecto de un Estado que, en ocasiones, demora ms
que las organizaciones sociales en aportar soluciones8.
Conclusiones
Los artculos de Dussel y Southwell apuestan por la construccin de un modelo
igualitario-inclusivo de escuela pblica, que busca combinar los valores republicanos de la
escuela argentina de comienzos del siglo XX con el ideal de inclusin de los sectores
socialmente ms desfavorecidos. Entonces, para la conformacin de una identidad colectiva
pluralista y respetuosa de la diversidad, el ncleo ideolgico constituido lo comn y lo
pblico debe encontrar el modo de articularse con la incorporacin de quienes viven en las
peores condiciones materiales. El modelo escolar igualitario-inclusivo que busca construirse
podra ser definido a travs de la frmula valores igualitarios de la vieja escuela de
comienzos de siglo XX + inclusin de los sectores tradicionalmente excluidos de ella. Para
que esa frmula sea posible, y dado que la distribucin de la riqueza demora mucho ms que
los marcos jurdicos en concretarse, la escuela deber apelar a los recursos que
independientemente de un Estado algo moroso las redes espontneas de la sociedad civil
ponen a su disposicin. Para resolver el problema de la desigualdad material, se exige a la
escuela que construya igualdad simblica.
Referencias
Bardin, L. (1996). Anlisis de contenido. Madrid. Akal
Davini, M. C. (2008 [1995]). La formacin docente en cuestin: poltica y pedagoga. Buenos
Aires: Paids
8
Conviene recordar aqu la mirada de Bernardo Sorj sobre las organizaciones de la sociedad civil: La
valorizacin y la expansin de organizaciones que se autodefinen como sociedad civil simboliza y expresa la
prdida de centralidad de la clase obrera, as como la crisis de los partidos polticos, la retraccin del Estado de
Bienestar y las crecientes dificultades de los gobiernos para enfrentar los nuevos desafos de sociedades
simultneamente fragmentadas y globalizadas. As, la sociedad civil ha pasado a ser considerada, en el
imaginario social, como la nica institucin portadora de virtudes polticas, inclusive por parecer no poltica,
valorizada como si se tratara de un nuevo agente de transformacin histrica y expresin de los deseos libertarios
y de justicia social ante la falta de humanidad del mercado y del Estado (citado en Ms Rocha & Vior, 2009:
32).
978-84-695-8363-0
51
Diker, G. & Terigi, F. (2008 [1997]). La formacin de maestros y profesores: hoja de ruta.
Buenos Aires: Paids
Dussel, I. & Southwell, M. (2004). La escuela y la igualdad: renovar la apuesta. El Monitor de
la Educacin, 1.
(2005). Qu es una buena escuela? El Monitor de la Educacin, 5.
(2006). De quin y para quin es la escuela. El Monitor de la Educacin, 9.
(2007). Ante el dolor, qu puede la escuela? El Monitor de la Educacin, 12.
(2009). La autoridad docente en cuestin: lneas para el debate. El Monitor de
la Educacin, 20.
(2010) La docencia y la responsabilidad poltica y pedaggica. El Monitor de
la Educacin, 25.
(2011). Jvenes: un tema que insiste. El Monitor de la Educacin, 28.
Filinich, M. (1998). Enunciacin. Buenos Aires: EUDEBA
Ms Rocha, S. M. & Vior, S. (2009) Nueva legislacin educacional: nueva poltica? En S.
Vior, M. Misuraca y S. Ms Rocha (comps.), Formacin de docentes. Qu cambi
despus de los 90 en las polticas, los currculos y las instituciones? (pp. 17-46).
Buenos Aires: Jorge Baudino.
978-84-695-8363-0
52
Resumen
Desde la pedagoga, la preocupacin por la equidad educativa est emergiendo con fuerza.
Una de las principales preocupaciones se centra en promover y favorecer la activacin de
procesos educativos exitosos para todos. Por este motivo, esta comunicacin presenta una
revisin de las principales evidencias empricas y tericas vinculadas con la equidad
educativa para avalar su delimitacin como constructo de investigacin, en el marco del
aprendizaje a lo largo de la vida y en relacin al principio del xito educativo para todos.
Para ello se realiza una revisin documental de las publicaciones de impacto internacional y
nacional relacionando equidad con igualdad, calidad y excelencia. En conclusin, la
evidencia emprica y terica disponible permite establecer que, la equidad educativa como
constructo, implica un nivel bsico comn para todos y satisfacer las necesidades de todos
los individuos a travs de un trato diferenciado: equidad de acceso, oferta, proceso y
resultados.
Descriptores: Equidad educativa, calidad, igualdad, excelencia, evidencia emprica.
Abstract
From a pedagogical perspective, there is a renewed interest on educational equity. A major
concern is focused on promoting and supporting successful educational process for everyone.
For this reason, this paper provides a review of the main theoretical and empirical evidence
related to educational equity to support its delimitation as research construct in the
framework of Life Long Learning and principle of Educational Success for All. To do this, a
set of national and international publications with impact about education equity is reviewed,
understanding it in relation to equality, quality and excellence. To sum up, the evidence
available reports us that educational equity implies a common baseline for all and meets the
needs of all individuals through differential treatment: equity of access, supply, process and
outcome.
Keywords: Educational equity, quality, equality, excellence, empirical evidence.
Introduccin
La perspectiva pedaggica sobre la equidad educativa
Cada vez es ms frecuente que la equidad sea objeto de tratamiento en las
publicaciones cientficas sobre educacin. Una revisin de las principales bases de datos,
978-84-695-8363-0
53
tanto internacionales como nacionales, avala esta afirmacin. Desde la primera referencia
sobre equidad en las bases de datos seleccionadas (ao 1976) hasta la ltima revisin
realizada (noviembre de 2012), se han localizado un total de 960 artculos publicados durante
este perodo. De ellos, el 70,6% (678 artculos) pertenecen a los aos comprendidos entre
2003 y 2012 (Snchez Santamara y Manzanares Moya, 2012). Esto se debe a los retos
planteados por la Sociedad del Conocimiento, as como la multitud de cuestiones no resueltas
en materia de desigualdad social y educativa. Esta situacin evidencia que el principio de
igualdad de oportunidades que, rige el Derecho a la Educacin, es limitado y poco ambicioso.
Y, por tanto, no da respuesta a las exigencias de la equidad educativa que, amparada en el
xito para todos, se entiende como un ideal que debe inspirar las polticas y prcticas
pedaggicas de los sistemas educativos modernos. Ahora procede avanzar en el anlisis de la
equidad no slo en clave social sino tambin educativa. La defensa de un enfoque pedaggico
sobre la equidad educativa implica alinearse con la idea de que es necesario superar el
enfoque tradicional, donde el esfuerzo se pona en analizar la contribucin de la educacin a
la equidad social, para postular la necesidad de un mnimo bsico de equidad y cohesin
social como condicin necesaria para que sea posible un proceso educativo exitoso
(Tedesco, 2011, p. 43).
Adems, en el contexto europeo, en los ltimos aos, las polticas educativas han
centrado sus esfuerzos en convertirse en instrumentos eficaces para la mejora de las
condiciones de equidad de los sistemas educativos, a partir del Marco de Referencia Europeo
de Competencias Bsicas para el Aprendizaje a lo Largo de la Vida (Unin Europea, 2006).
La preocupacin poltica actual reside en mejorar el rendimiento acadmico de los sistemas
educativos, prestando especial atencin a los problemas que tienen planteados ante el fracaso
y abandono escolar (OCDE, 2012).
Por ello, en este trabajo se ponen en valor una serie de evidencias tericas y empricas
derivadas de un proceso de revisin de la literatura cientfica, sobre la equidad educativa
como constructo de investigacin, en el marco del xito educativo para todos y en relacin a
conceptos como la igualdad, calidad y excelencia.
Mtodo
El mtodo escogido ha sido el de revisin analtica (McMillan y Schumacher, 2005),
en el sentido de llevar a cabo una revisin y lectura selectiva mediante un anlisis crtico.
Tabla 1
Sntesis de las caractersticas generales del proceso de revisin analtica
Procedimiento
Analticodescriptivo
Fases
I. Delimitar el tpico para
la bsqueda
II. Fuentes secundarias
III. Fuentes primarias
IV. Documentos
relevantes
Tareas
Identificar y seleccionar las fuentes secundarias, a partir de
las cuales poder delimitar el sentido y alcance del tpico:
equidad (igualdad, calidad y excelencia)
Rastrear el tpico desde las fuentes secundarias para
localizar las fuentes primarias
Analizar y escoger las fuentes primarias
Elaborar la propuesta de documentos relevantes para dar
respuesta a la aproximacin descriptiva y analtica sobre el
estado del arte
978-84-695-8363-0
54
Del proceso de revisin bibliogrfica se han extrado una serie de datos que nos
permiten establecer una identificacin de las principales evidencias tericas y empricas
disponibles sobre la equidad en relacin a conceptos como la igualdad, la calidad y la
excelencia. No obstante este anlisis, todo y haberse contemplado una serie de criterios de
exhaustividad, credibilidad y sistematizacin, presenta algunas limitaciones, al no tratarse de
un estudio bibliomtrico.
Resultados: evidencia terica y emprica disponible
Equidad educativa en relacin con la igualdad
Existe una situacin generalizada y normalizada en relacin a la igualdad y la equidad:
el uso indiscriminado de ambos trminos como sinnimos, de forma muy notable en
educacin. Desde la perspectiva terica, en torno a la concepcin de la equidad educativa,
limitada a igualdad de oportunidades, coindice con la tendencia global en la que: The basic
problems of equity theory are that it employs a one-dimensional concept of fairness and
emphasizes only the fairness of distribution, ignoring the fairness of procedure. An alternative
to equity theory is based on two justice rules: the distributional and the procedural
(Espinoza, 2007, p. 349). El contraste con la literatura cientfica sobre el tema, nos permite
mantener que la igualdad de oportunidades no es suficiente para garantizar el xito educativo,
aunque es necesaria para poder hablar de respuesta ajustada a los parmetros de la equidad
educativa. La relacin que se ha generalizado entre ambos conceptos no facilita un uso acorde
con su significado real, haciendo que, en ocasiones, se use de forma indiscriminada ambos
conceptos para referirse a una misma cuestin.
Tabla 2
Definicin y niveles bsicos de igualdad y equidad educativa
Igualdad educativa
Todo el alumnado es tratado de forma que se le
garantiza el acceso a las mismas oportunidades
educativas
Igualdad de oportunidades
Mismas oportunidades para participar en
actividades educativas, en el acceso a servicios
educativos, etc., sin obstculos que limiten la
igualdad
Equidad educativa
Un nivel bsico comn para todos y satisfacer
las necesidades de todos los individuos a travs
de un trato diferenciado
Igualdad de resultados
Mismas oportunidades para acceder a un
conjunto bsico de conocimientos y para
profundizar en la formacin
Bronfenbrenner (1973), sobre ello seala que la igualdad hace referencia a cantidad,
mientras que la equidad se vincula to the fairness on social justice of the distribution of
education. Para Farrell, uno de los principales tericos sobre la igualdad de oportunidades
con implicaciones metodolgicas en el desarrollo de un marco de referencia para la
investigacin de la igualdad en educacin, also recognizes that these definitions may very
well differ depending on individual, subgroup or group perspectives (1999, p. 153).
Distintos autores insisten en tener presente las similitudes y diferencias entre ambos
conceptos (Demeuse, 2004). Para ello, aportan argumentos para comprender la
interdependencia entre igualdad y la equidad educativa.
978-84-695-8363-0
55
Tabla 3
Evidencia terica sobre la igualdad y la equidad educativa
Evidencia terica
Grados de un mismo proceso
De las mnimas condiciones a
las condiciones mnimas
De la aspiracin resuelta al
ideal deseado
Definicin
Conceptos interrelacionados, distintos grados de atender
necesidades educativas
La igualdad como primera equidad
Igualdad no es suficiente para crear condiciones pedaggicas
mnimas para un proceso educativo de xito para todos
Igualdad educativa aspiracin resuelta una vez que todos tienen
acceso a los mismos servicios educativos y con los mismos
recursos
Equidad es un ideal basado en criterios de justicia social e
inclusin, al introducir la diferencia como principio de igualdad
978-84-695-8363-0
Artculos (Calidad+Equida d)
56
Total de a rtculos
2012
2011
2010
2009
2008
2007
2006
2005
2004
2003
2002
2001
2000
1999
1998
1997
1995
1993
0%
10%
20%
30%
40%
50%
60%
70%
80%
90%
100%
Grfico 1. Artculos cientficos sobre los tpicos de equidad y calidad recogidos en ISOC-Educacin,
1993/2012 (%)
Nota: criterio de identificacin y seleccin ha sido que el tpico equidad y calidad aparecieran en el ttulo del
artculo.
Fuente: http://bddoc.csic.es
978-84-695-8363-0
57
978-84-695-8363-0
58
Discusin
La necesidad social, poltica y educativa por hacer real una educacin amparada en los
principios de la equidad, que superen la igualdad de oportunidades y contemplen las
implicaciones de las evidencias derivadas de la calidad y excelencia educativa (Demeuse y
Baye, 2007), cobra mayor relevancia en un momento en el que la emergencia del enfoque de
capacidades nos exige avanzar en la creacin de condiciones de aprendizaje para todos. Del
mismo modo, se brinda el reto de adecuar los procesos educativos para que garanticen a todos
los alumnos el mximo desarrollo sus capacidades. Todo ello en el marco del principio de
aprendizaje a lo largo de la vida, de tal modo, que cualquier alumno est en disposicin de
poder aspirar a ser aquello que se ha propuesto, en trminos de vida digna y con las garantas
del derecho a la educacin ms all del acceso a la misma, entendiendo que los valores de
ciudadana deben ser compartidos y desarrollados en-por-para todos (Snchez Santamara y
Manzanares, 2012).
978-84-695-8363-0
59
978-84-695-8363-0
60
978-84-695-8363-0
61
Resumen
El proyecto de investigacin Espacios de participacin ciudadana: anlisis y propuestas
desde una perspectiva educativa (ref.: 2012V/PUNED/0005) tiene como objetivo ltimo es
la generacin de propuestas de carcter educativo en torno a la participacin, derivadas del
trabajo realizado a lo largo del proyecto y contando con la participacin de los agentes e
informantes durante el estudio, de tal modo que los procesos y resultados sean significativos
desde la perspectiva de los implicados. Presentamos un avance del proyecto, que se
encuentra en la fase de revisin conceptual y elaboracin del mapa de espacios de
participacin en la Comunidad de Madrid. El proceso de mapeo se ha planteado de forma
participativa desde el comienzo, de modo que agentes vinculados a espacios de participacin
colaboran en la conceptualizacin, el diseo de los instrumentos de recogida de informacin
y la propia construccin de las cartografas.
Descriptores: investigacin educativa; investigacin participativa; participacin ciudadana;
cartografa social.
Abstract
The research project "Citizen participation scenarios: analysis and proposals from an
educational perspective" (ref.: 2012V/PUNED/0005) has, as a final goal, the generation of
educational proposals regarding participation, derived from the work done throughout the
project and with the participation of agents and informants during the study, so that the
processes and results become meaningful from the perspective of those involved. We present
the progress of the project, which is in the conceptual review stage and the mapping of
participation scenarios in the Community of Madrid. The mapping process has been proposed
as participatory from the beginning, so that agents linked to the scenarios collaborate in the
conceptualization, design of data collection instruments and the actual construction of the
maps.
Keywords: educational research; participatory research; citizen participation; social
cartography.
Introduccin
En sociedades democrticas, la participacin se considera un elemento fundamental
para garantizar la cohesin social y la legitimidad poltica. Adems de como un medio o
978-84-695-8363-0
62
978-84-695-8363-0
63
978-84-695-8363-0
64
978-84-695-8363-0
65
El trabajo colaborativo con otros grupos para la elaboracin del mapa aporta una
amplia riqueza de perspectivas, integrndolas en un nico grupo de trabajo de
personas con intereses y perfiles profesionales diferentes, pero que construyen un
espacio interdisciplinar que contribuye a la comprensin y afrontamiento dialgico del
proceso investigador desde un primer momento. Este espacio de reflexin y dilogo
donde se comparten conocimientos y posturas se convierte en una de las aportaciones
principales del proyecto.
978-84-695-8363-0
66
978-84-695-8363-0
67
Resumen
En la presente comunicacin presentamos los resultados cualitativos de un proyecto de
investigacin titulado Resiliencia y xito escolar en el alumnado de secundaria de
procedencia extranjera. El proyecto aborda y caracteriza, desde el enfoque de la
resiliencia, cmo el alumnado migrante se enfrenta a una etapa de alto riesgo de abandono
escolar, la Educacin Secundaria obligatoria (ESO), y el momento de transicin acadmica
hacia la Post-obligatoria (PO). La propuesta incorpora el reto de analizar y valorar los
mecanismos resilientes desplegados por el alumnado migrante que pueden dar luz a
conseguir que procesos, a priori, calificados como problemticos o dificultosos para estos
grupos, debido a su situacin de mayor vulnerabilidad, sean una red protectora que
favorezca trayectorias de xito escolar.
Descriptores: Resiliencia, Alumnado migrante, Transicin acadmica y xito escolar.
Abstract
In this paper we present the qualitative results of a research project entitled "Resilience and
academic success in secondary school students of foreign origin. The project addresses and
characterized, from the approach of resilience, such as migrant students stage faces a high
risk of dropping out, Compulsory Secondary Education (ESO) and the academic transition
moment to the Post-compulsory (PO). The proposal incorporates the challenge of analyzing
and evaluating resilient mechanisms deployed by migrant students that can give light to get
processes a priori classified as problematic or difficult for these groups because of their more
vulnerable than a protective network that favors trajectories of academic success.
Keywords: Resilience, Migrant students, Academic and school success transition.
Introduccin
El presente estudio describe, analiza y caracteriza, desde el enfoque de la resiliencia,
cmo el alumnado migrante se enfrenta a la etapa de la Educacin Secundaria Obligatoria y,
especficamente, al momento de transicin acadmica hacia la Enseanza Postobligatoria
considerada de alto riesgo de abandono. El aporte ms significativo de esta investigacin es la
perspectiva positiva o de centrar la investigacin en los indicadores de xito de esta
978-84-695-8363-0
68
Tal y como se extrae del estudio realizado por el grupo de investigacin TRALS (Transiciones Acadmicas y
laborales) "El xito en las trayectorias formativas obligatorias y postobligatorias en contextos multiculturales".
Financiado dentro de la convocatoria AMIGO-2005.Secretara para la inmigracin y la Direccin General de
Investigacin de la Generalidad de Catalunya.
10
En el mbito nacional las investigaciones son escasas en comparacin con el contexto internacional,
especialmente el norteamericano donde ha convertido en un rea de estudio destacada (Flowers, 2004; Cabrera et
al., 2005).
978-84-695-8363-0
69
en las trayectorias de xito de estos estudiantes? Se trata de los mismos factores protectores
en todos los grupos culturales? Qu resortes resilientes han activado? Han desarrollado
determinadas capacidades especficas para compensar los factores de riesgo que han vivido en
su etapa formativa? Cules? Cmo interactan? En qu medida los programas y acciones
educativas son promotores de trayectorias de xito desde esta perspectiva?
Mtodo
En base a los objetivos anteriormente descritos, el trabajo de investigacin presenta un
diseo transversal estructurado en cinco fases, combinando estrategias de recogida de datos
cualitativos y cuantitativos.
Fase II
Fase III
Fase IV
Fundamentacin
de la
Investigacin
Elaboracin
instrumentos de
diagnstico
Diagnstico
resiliencia
ESO
Seguimiento
transicin
educativa
Fase V:
Elaboracin y
propuestas de
mejora
978-84-695-8363-0
70
Tabla 1
Dimensiones de la entrevista
Descripcin del
proceso
migratorio
Acontecimientos
vitales
Soporte
Continuidad
ESO-POST
Orientacin al
futuro
DIMENSIONES DE LA ENTREVISTA
Inicio de la entrevista Me gustara conocer un poco ms cmo ha sido tu
experiencia de vida (y de tu familia) aqu en Catalua: Veo que naciste
aqu... / Llegaste a ... / tienes o no hermanos y hermanas .. . / Que motiv
el hecho de venir? ...
Percepcin de situaciones adversas en la migracin
Resolucin de la situacin conflictiva
Aprendizaje, crecimiento, transformacin
Apoyo social: fuentes y funcionalidad
Modelos de xito
Tutores de resiliencia del mbito educativo
Descripcin
Percepcin de situaciones adversas en la escolarizacin
Superacin de dificultades educativas
Motivos de persistencia acadmica
Percepcin de logro
Expectativa acadmicas y profesionales
Pensar en el futuro
Valor atribudo a los estudios
Resultados
El anlisis de los resultados lo haremos a partir de los objetivos de las entrevistas.
Respecto al proceso migratorio, la investigacin y la literatura sobre el tema ponen de
manifiesto que el proceso migratorio es un proceso traumtico (Massot, 2003:48) que afecta
especficamente a la identidad. Las personas que emigran sufren situaciones complejas de
resolver: la prdida de roles vitales (nietos, sobrinos, amigos, etc.). En el caso especfico de la
muestra, muchos de los jvenes han emigrado despus que sus padres, es decir, que este
proceso conlleva la reconstruccin del vnculo filial. En las entrevistas analizadas los jvenes
manifiestan prdidas o separaciones difciles, en las que han de demostrar una gran capacidad
de resiliencia para afrontarlas positivamente. As, los jvenes expresan que la emigracin es
negativa porque conlleva la separacin de la familia y de las amistades del pas de origen: De
negativo la emigracin hace que tengas que cambiar las amistades y dejar mi familia all.
(E2).
Otro elemento traumtico con que se enfrentan los jvenes es la llamada migracin
escalonada que conlleva que los hijos permanezcan en el lugar de origen al cuidado de
familiares. Esta situacin hace que el proceso migratorio de los hijos est impregnado del
dolor de la separacin de los familiares que, hasta ese momento, les han criado. Por otra parte,
el reencuentro con los padres suele ser complejo ya que han vivido separados una larga
temporada y esto produce un proceso de reacomodacin y el establecimiento de nuevas pautas
de convivencia, tanto en el ncleo familiar como en el entorno social: S fue difcil estar
separado de mi padre, nos haca visitas, iba a Bolivia, pero siempre ha habido un
alejamiento y aqu por suerte he podido recuperarlo (E12). Asimismo, se observa, en un 50%
de los casos, que los padres se han separado y, de estas separaciones, el 40% de las madres
han vuelto a formar pareja: Mi madre tiene una nueva pareja, es un seor boliviano. Yo lo
llamo padre, se llama Ronald, est conmigo desde el 2004 (E5). En todos los casos las nuevas
parejas de las madres son aceptadas por los hijos y las describen postivimaente: los tratan
bien, los ayudan y estimulan en los estudios. El proceso migratorio lleva aparejado la
reorganizacin del grupo familiar tanto en el pas de acogida como en el de origen: Nos
quedamos con mi abuela (E3).
978-84-695-8363-0
71
978-84-695-8363-0
72
que, de una manera u otra, les facilitan o acompaan en su trayectoria acadmica. Tambin
influyen los modelos de xito que tienen ya que, entre las relaciones de amistad o familiares
que tienen los jvenes, destaca la presencia de algunos que estn cursando o ya han terminado
estudios superiores. Y por ltimo la existencia o no de posibles tutores de resiliencia en el
mbito educativo, en algunos casos, destaca que entre sus relaciones aparece la presencia de
un adulto que les es muy significativo.
Respecto a la continuidad ESO-Postobligatoria, se evidencia que la transicin ESOPOST es considerada por los propios entrevistados como uno de esos momentos decisivos en
su trayectoria, tanto acadmica como personal. Concretamente, nos centraremos en cuatro de
estos aspectos principales: la percepcin de los alumnos de situaciones adversas, la
percepcin de los alumnos de dificultades educativas y los motivos de persistencia acadmica.
Al finalizar 4 de ESO, los alumnos deben decidir si continan estudiando o no, ya que a
partir de ese momento su presencia en el sistema educativo no es obligatoria. Se evidencia
una significativa variedad de respuestas a la cuestin de por qu seguir estudiando. Estas
respuestas se pueden dividir en dos grandes subgrupos: por un lado, aquellas que hacen
referencia a factores intrnsecos (esfuerzo personal, motivacin...) como aspectos
fundamentales en su toma de decisiones, y por otra parte, aquellas que fundamentan su toma
de decisiones en factores extrnsecos (contexto econmico y social, modelos que observan en
personas significativas para ellos...). Entre los condicionantes extrnsecos destacan cuatro
condicionantes clave: un primer condicionante es el valor que la familia -fundamentalmente
los progenitores- atribuye a la educacin. Entre los discursos familiares que se pueden
considerar resilientes cabe destacar aquellos que valoran la educacin como una oportunidad
de progreso y/o mejora personal y profesional: Supongo que habr influido mi madre que
tambin quiere que estudie y saque una carrera y todo(E1). Un segundo condicionante
extrnseco es la percepcin del alumno del modelo familiar hacia a la educacin.
A diferencia del elemento anterior, centrado en el discurso y las opiniones, este
segundo elemento se centra en las acciones, es decir, en las trayectorias y experiencias
familiares en el mbito educativo. Un tercer condicionante es el contexto econmico y social.
En este sentido, en el contexto actual de crisis econmica, algunos jvenes se decantan por
continuar formndose frente la falta de oportunidades de empleo y la elevada tasa de
desempleo, especialmente entre el colectivo joven: Por qu ahora mismo con la crisis no se
puede hacer otra cosa... (E9). Y un cuarto condicionate es el soporte (tanto educativo,
motivacional como emocional) que obtienen de la interaccin con diferentes personas. Estas
personas y su apoyo les han ayudado en su trayectoria escolar, y orientado en su continuidad
ESO-POST. Hay varias tipologas de apoyo, por una parte, aquellas ms dirigidas a un apoyo
especfico en el mbito educativo como, por ejemplo, el apoyo escolar. Y por otro lado,
aquellas que van ms all de lo estrictamente escolar, y abordan dimensiones ms personales
(como la autoestima, la motivacin...), pero al mismo tiempo ntimamente relacionadas con la
dimensin educativa y escolar: Mi padre siempre me lo ha dicho que tienes tus frutos al final
(E4).
Para finalizar hemos analizado la orientacin hacia el futuro: dos elementos clave de la
resiliencia son el realismo, y particularmente, la proyeccin de futuro. Y lo hemos hecho
centrndonos, principalmente, en tres aspectos: expectativas acadmico-profesionales, pensar
el futuro y valor de los estudios. Respecto a las expectativas acadmico-profesionales de los
jvenes se observa cmo los jvenes asocian la idea de altas expectativas de futuro con
pensarse como estudiantes de universidades, profesionales cualificados o, dedicndose a
profesiones liberales como abogado, psiclogo, profesor, entre otros: Yo pienso abrir mi
978-84-695-8363-0
73
propio consultorio (E3). En la mayora de las entrevists se aprecia que los jovenes reconcen
pensar mucho y seguido sobre su futuro, tanto a corto, medio y largo plazo: Voy planeado un
poco cmo puedo hacerlo o qu posibilidades tengo y cul sera la mejor opcin (E12). En
cuanto al valor de los estudios, el alumnado entrevistado relaciona de forma muy intensa el
hecho de estudiar y tener una titulacin acadmica-profesional con la idea de progreso, de
mejora, de trayectoria ascendente, incluso en algunos casos, de xito. En este sentido, se
aprecia que muchos alumnos eligen su formacin en funcin de las potencialidades laborales
que asocian a los estudios que les gustara iniciar en el futuro.
Discusin
Como conclusiones ms destacables, que permitiran vincular los resultados obtenidos
con el marco terico desarrollado, podemos destacar que la resiliencia parece desarrollarse en
tres planos diferentes. El primero est relacionado con un proyecto general de carcter
acadmico que pasara, entre otros, por la influencia de la familia y la accin institucional del
centro educativo. Aqu es donde se refuerza la perspectiva individual de la necesidad de
continuar estudios y posibilita construir expectativas de xito en un escenario futuro de
promocin acadmica. Estos soportes adoptan un sentido ms estratgico vinculados al
proyecto de vida. El segundo aspecto estara relacionado con la gestin diaria de los
problemas y dificultades que deben abordarse para hacer posible esta perspectiva. En este
sentido, parece que son los grupos de iguales y las personas vinculadas con el sujeto (tutores,
amigos, compaeros de clase, etc.) los que proporcionan recursos de estmulo y ayuda a la
persona de tal forma que permiten ir superando las dificultades y necesidades especficas que
van apareciendo puntualmente y que se constituyen en soportes ms permanentes pero de
carcter coyuntural. Finalmente, aparecen las condiciones individuales de cada persona,
donde se da, por un lado, la capacidad de aprovechar las oportunidades del contexto y, por
otro, su capacidad para hacer frente a adversidades sobreponindose ellas mediante la
seguridad y confianza de un autoconcepto poderoso, vindose a s misma con potencialidad
para afrontar y salir airosa de los retos que se puedan plantear.
La autopercepcin positiva, en relacin con los estudios, contribuye al desarrollo de
procesos de transicin exitosos. Constituye un aspecto de primer orden para potenciar el
rendimiento y, por tanto, la transicin acadmica. Si, desde la escuela se pretende desarrollar
competencias resilientes, hay que considerar este aspecto muy vinculado al autoconcepto y
que estara orientado a la bsqueda de formas de trabajo que resultan estimulantes y
potenciadoras de una autopercepcin positiva para el alumnado. La existencia de redes
relacionales con personas que tienen una experiencia de xito acadmico, influye en la
posibilidad de transitar. El hecho de tener referentes cercanos con experiencia de xito
acadmico influye de manera positiva en el alumnado; se ve como una opcin factible y
refuerza esta posibilidad. Existe una correlacin importante entre la resiliencia y el
sentimiento de pertenencia de los alumnos a la institucin educativa. El vnculo entre una
percepcin acadmica positiva y el compromiso con la institucin educativa, provoca que se
desarrolle un sentimiento de pertenencia importante hacia el centro educativo. El alumnado
que presenta mayores niveles de resiliencia, tambin tienen un fuerte sentimiento de
pertenencia que, adems de propiciar la cohesin interna de carcter institucional, tambin
hace que el alumnado se sienta ms integrado y seguro en el contexto educativo.
Para finalizar, realizamos algunas propuestas de actuacin como son: i) fortalecer las
condiciones individuales que pueden promover la resiliencia y asegurar un xito en la
transicin acadmica y profesional, ii) potenciar el desarrollo de un sentimiento de
978-84-695-8363-0
74
pertenencia del alumnado hacia la institucin escolar, iii) estmulo a la participacin en las
dinmicas del centro, iv) potenciar los vnculos escuela-comunidad mediante los planes de
entorno o las actividades de aprendizaje-servicio, v) promover procesos ptimos de
orientacin y transicin acadmica y profesional, vi) potenciar la incorporacin de las familias
en los procesos orientadores del alumnado, vii) disear e implementar estrategias, actividades
y programas que den la oportunidad de responder con xito al estudiante, viii) favorecer
espacios y trayectorias que retornen de forma realista y sostenida una imagen de posibilidad y
autoeficacia personal y acadmica, ix) implementar programas de formacin y/o
asesoramiento en resiliencia, tanto para los profesionales en ejercicio como en formacin
inicial.
Referencias
Alva, S. A. (1991). Academic invulnerability among Mexican-Americans students: The
importance of protective ressources and appraisals. Hispanic Journal of Behavioral
Sciences, 13(1), 18-34.
Cabrera, A. F., Burkum, K. R. y La Nasa, S. M. (2005). Pathways to a four year degree:
Determinants of transfer and degree completion. En A. Seidman (Ed.), College
Student Retention: A Formula for Student Success. Westport, CT: ACE/Praeger series
on Higher Education.
Fergus, S. y Zimmerman, M. A. (2005). Adolescent resilience: a framework for understanding
healthy development in the face of risk. Annual Review of Public Health, 26, 1-26.
Figuera, P., Freixa, M., Massot, I., Torrado, M. y Rodrguez Moreno, M.L. (2008). Lxit en
les trajectries formatives obligatries i postobligatries en contextos multiculturals.
Recerca i Immigraci. Barcelona: Generalitat de Catalunya.
Flowers, L. A. (2004). Examining the effects of students involvement on African American
College student development. Journal of College Student Development, nov-dic., 102115.
Kaplan, H. B. (1999). Toward an understanding of resilience: A critical review of definitions
and models. En M.D Glantz y J.L Johnson (Eds.), Resilience and development.
Positive life adaptations (pp. 17-83). Nueva York: Kluwer Academic/Plenum press.
Luthar, S. (2003). Resilience and vulnerability. Adaptation in the context of childhood
adversisties. Cambridge: Cambridge University Press.
Massot, M. (2003). Jvenes entre culturas. La construccin de la identidad en contextos
multiculturales. Bilbao: Descle.
Masten, A. S. (2001). Ordinary magic. Resilience processes in development. American
Psychologist, 56, 227-238.
Nusche, D. (2009). What works in migrant education? A review of evidence and policy
options. OECD Education Working Papers, 22.
978-84-695-8363-0
75
OECD
(2009).
PISA
2009
Results.
Disponible
en:
<www.oecd.org/document/61/0,3746,en_32252351_32235731_46567613_1_1_1_1,0
0.html> Fecha de consulta 12/03/2012.
OECD
978-84-695-8363-0
76
Resumen
La exposicin presenta los resultados preliminares de una investigacin cualitativa, basada
en entrevistas en profundidad a personas que fueron objeto de bullying homofbico en Chile
durante las ltimas tres dcadas en su paso por el sistema escolar formal. A travs de las
entrevistas se intent captar los significados que tanto las vctimas cuanto la escuela le
atribuyeron a esos hechos de violencia,
intentando establecer la incidencia del
heterosexismo, la cultura del silencio imperante en el pas en relacin al homoerotismo e
invisibilizacin social de las personas LGBTI. Asimismo, se describe el manejo o
afrontamiento que hicieron los/as profesores/as y/o directivos de esos mismos
establecimientos ante esas situaciones de violencia, as como la eficacia de esas medidas en
el resguardo de la integridad fsica y psico-emocional de las vctimas.
Descriptores: Bullying homofbico, Trayectoria, Chile.
Abstract
The presentation gives the preliminary results of a qualitative research based on in-depth
interviews with people who were the subject of homophobic bullying in Chile during the last
three decades in their passage through the formal school system. Through interviews
attempted to capture the meanings that both victims and the school attributed to these acts of
violence, trying to establish the incidence of heterosexism, the culture of silence prevailing in
the country in relation to homoeroticism and social invisibility of people LGBTI. It also
describes the management or coping that teachers and executives did of those same
establishments to such situations of violence, and the effectiveness of these measures in
safeguarding the physical and psycho-emotional integrity of victims.
Keywords: Homophobic bullying, Trajectory, Chile.
Introduccin
La literatura internacional ha identificado la discriminacin por orientacin sexual en
las instituciones educativas bajo la denominacin de bullying homofbico. Platero (2007),
haciendo referencia a este tipo especfico de violencia lo define de la siguiente manera:
El bullying homofobico son aquellos comportamientos violentos por los que un alumno o
alumna se expone y/o queda expuesto repetidamente a la exclusin, aislamiento, amenaza,
insultos y agresiones por parte de sus iguales, una o varias personas que estn en su entorno
978-84-695-8363-0
77
ms prximo, en una relacin desigual de poder, donde los agresores o bullies se sirven de la
homofobia, el sexismo, y los valores asociados al heterosexismo (Platero, 2007: 5).
978-84-695-8363-0
78
978-84-695-8363-0
79
prcticas institucionales que lo posibilitan. De ah, que cualquier medida que tienda a revertir
ese estado de cosas no puede reducirse a la asistencia y acompaamiento a los bullies o de sus
vctimas. Las instituciones, y la escuela entendida como institucin social clave, tambin
requiere ser revisada y sanada; pues, ella es al mismo tiempo portadora y defensora de la
ideologa heterosexista, promotora de la homofobia y responsable de los excesos de los
guardianes del orden que ella misma promueve.
En el caso chileno, el bullying homofbico ha sido pieza fundamental del entramado
de relaciones entre los educandos entre s o entre stos y sus formadores. Por lo pronto, la
violencia homofbica expresada en todas sus formas ha estado siempre presente.
Probablemente, lo que marca la diferencia entre el bullying homofbico en la actualidad,
respecto de las dcadas pasadas, sea la paulatina desaparicin de la violencia fsica. Hoy en
da, dadas las campaas de prevencin de la violencia escolar y los marcos legales
regulatorios recientemente promulgados (ley antibullying 20.536 - 2011 y ley
antidiscriminacin 20.609 - 2012), es menos frecuente encontrar ejemplos de este tipo de
violencia en los establecimientos educacionales del pas. Al parecer, no slo hay mayor
sensibilidad social y conciencia de parte de los directivos de las escuelas y del profesorado,
sino de la sociedad en su conjunto.
En el mbito estrictamente educativo, la homofobia se ha manifestado de diversas
formas. La ms recurrente ha sido la invisibilizacin de las personas LGBTI de los sistemas
escolares formales a travs de una heterosexualidad impuesta o el desconocimiento de sus
inclinaciones ertico - afectivas, o por medio de la omisin del tema del currculo escolar,
particularmente los planes y programas de educacin sexual. Desde los primeros planes y
programas de alcance nacional en la dcada de 1960 hasta la actualidad, la tendencia
recurrente ha sido la invisibilizacin del homoerotismo. Las pocas veces que el tema ha
irrumpido en escena ha sido para subrayar el supuesto carcter patolgico, desviante o
antinatural de las prcticas homoerticas; o vinculndolo a la transmisin del VIH/SIDA, con
lo cual nuevamente se refuerza la nocin medicalizadora.
La posibilidad de realizacin ertico-afectiva, que escapa a los patrones del
heterosexismo y subraya la soledad como condicin ineludible de todo sujeto LGBTI, nunca
ha sido presentada como una alternativa cierta de realizacin para un adolescente o un joven
en proceso de construccin de su identidad sexual y/o genrica. Es ms, en la presente dcada,
de acuerdo a los testimonios de los entrevistados, el manejo que han hecho de las situaciones
de violencia los directivos de los establecimientos o an de las propias autoridades del
MINEDUC, evidencian que si bien esos jvenes no son expulsados en razn de su orientacin
sexual o identidad genrica, o por haber exteriorizado alguna expresin de afecto hacia
algn/a compaero/a de su mismo sexo, ellos/as son simplemente tolerados, imponindose
una autntica tolerancia de lo inevitable. Es decir, dadas las prohibiciones de expulsin de
las escuelas, los directivos y profesores se limitan a aguantar a esos jvenes, calificando las
situaciones que envuelven a estos estudiantes como problemticas o nudos crticos.
Calificativo que escasamente esconde la homofobia institucional de la cual los bullies no son
sino piezas funcionales de una cultura excluyente profundamente arraigada en el sistema
escolar chileno.
En lo que respecta a la trayectoria histrica del bullying homofbico en Chile, se
puede afirmar que si bien ste se ha mantenido a lo largo del tiempo, algunas de sus
expresiones se han matizado o han asumido otras formas de hostigamiento. Por lo pronto,
dados numerosos testimonios recogidos con adolescentes y jvenes LGBTI que estn insertos
978-84-695-8363-0
80
en el sistema escolar o lo estaban hasta hace muy poco tiempo, sumado a las campaas e
iniciativas del MINEDUC para prevenir la violencia fsica, se puede afirmar que esta forma
de violencia ha tendido a desaparecer, al menos en trminos de frecuencia o intensidad. Esta
tendencia marca una clara diferencia respecto de lo que ocurra en las dcadas pasadas,
especialmente hasta fines de la dcada de 1980, donde la violencia fsica era una prctica a la
que recurran algunos jvenes para disuadir a sus compaeros con una orientacin sexual y/o
genrica distinta a la heterosexual, y de la cual tanto directivos como profesores se hacan
partcipe con su silencio o desinters por sancionar a los agresores. Hasta la dcada de 1970,
donde el castigo fsico era tolerado en las escuelas como forma de enseanza, no slo los
pares incurran en hechos de violencia hacia jvenes disidentes del orden heterosexista, sino
an algunos profesores. Hasta esa poca exista la idea de que el maltrato fsico no slo era un
recurso de enseanza sino un mecanismo eficiente para revertir lo que se consideraba
conductas sexuales desviadas o enfermizas. Esto es, la violencia fsica no slo estaba
legitimada como medio de enseanza, sino se crea que a travs de ella se contribua a que
los/as adolescentes se convirtieran en autnticos hombres y mujeres.
Cabe mencionar que la violencia fsica iba acompaada de la humillacin y el escarnio
pblico, la sorna o la burla. Y son, probablemente, estas ltimas dimensiones del bullying
homofbico las que se han mantenido en el tiempo en las relaciones escolares con mayor
intensidad. En la actualidad esta dimensin se ha reforzado con la masificacin de las redes
sociales, al punto que la ridiculizacin o la injuria no se restringen al espacio escolar sino que
se socializa a travs de estas redes (bullying ciberntico). El proceso de cambio del bullying
homofbico en Chile se comienza a manifestar, coincidentemente con el fin de la dictadura y
el trnsito a la democracia. Los intentos fallidos de los primeros gobiernos democrticos por
reposicionar la discusin en torno a la educacin sexual en las escuelas a travs de las
denominadas JOCAS (Jornadas de Conversacin sobre Afectividad y Sexualidad), instancia
formativa que haba sido prcticamente barrida del currculo escolar durante la dictadura
cvico-militar; pero, fundamentalmente, la derogacin el ao 1998 del Artculo 365 del
Cdigo Penal que penalizaba la sodoma contribuyeron decisivamente a la reduccin de la
violencia fsica como forma de expresin preferente del bullying homofbico en el pas.
En este proceso de visibilizacin y sensibilizacin social del homoerotismo como
experiencia vlida de relacionamiento ertico-afectivo, no se puede desconocer la lucha
poltica de reivindicacin y promocin de derechos de las distintas agrupaciones LGBTI
organizadas, as como el aporte de las organizaciones de prevencin del VIH/SIDA,
especialmente en el contexto de discusin y posterior promulgacin de la denominada Ley
del Sida (Ley 19.779 del 14 diciciembre de 2001, modificada por la Ley 20.077 del 24 de
noviviembre de 2005). Ley que no slo garantizaba el acceso universal a los medicamentos y
tratamientos paliativos de la enfermedad, sino tambin estableca las sanciones que intentaban
resguardar la no discriminacin, en distintas esferas, hacia las personas viviendo con el virus.
Sin lugar a dudas, estas iniciativas legales sumadas a los cambios culturales,
especialmente de los jvenes de los grandes centros urbanos del pas, en relacin a la
sexualidad, han contribuido a matizar las expresiones ms virulentas de la violencia fsica.
Con todo, no ha desaparecido del todo como forma de relacin entre pares, o no ha dado lugar
a agrupaciones de jvenes simpatizantes (situacin impensable hace algunas dcadas atrs) de
ideas neonazis cuyas vctimas preferentes son, precisamente, personas LGBTI o migrantes
extranjeros. La mayor visibilidad pblica de las personas LGBTI pareciera haber sido el
detonante o la justificacin de los actos de odio de esos grupos. Sin contar que la homofobia
cultural ha dado pie a la denominada homofobia liberal (Borrillo, 2001), en el sentido que
978-84-695-8363-0
81
el discurso pblico dice tolerar a las mal llamadas minoras sexuales, pero a condicin de que
se mantengan dentro de los estrechos mrgenes del ghetto homosexual. Es decir, la supuesta
tolerancia social hacia las personas LGBTI no es ms que una mascarada y un mecanismo
perverso de legitimacin de la invisibilizacin, de la cual la escuela es una fiel exponente, por
cuanto pese a la presencia creciente de adolescentes y jvenes disidentes sexuales y/o
genricos que deciden hacer pblica su orientacin, en cuanto institucin social fundamental
no slo sigue desconociendo la diversidad sexual y genrica de su espacio de influencia, sino
que contina con sus predicamentos y acciones educativas imponiendo la heterosexualidad
como pauta de comportamiento socialmente aceptada y posibilidad de realizacin erticoafectiva. Tal actitud vulnera claramente tanto el derecho de los sujetos LGBTI a la
autodeterminacin como la integridad sociopsicoemocional de los mismos.
Y si bien, como hacamos mencin ms arriba, algunas manifestaciones del bullying
homofbico en Chile, especialmente en sus expresiones de violencia fsica, en los sectores
urbanos medios se ha matizado, no se puede decir que ocurra lo mismo en las ciudades ms
pequeas o zonas rurales, as como en los sectores socioeconmicos ms vulnerables donde la
violencia en todas sus formas traspasa todas las relaciones sociales. Con todo, esta ltima
afirmacin no es argumento suficiente para explicar un tipo de violencia especfica como es el
bullying homofbico. Es decir, la transversalidad de la violencia en los sectores vulnerables o
ms deprivados socioeconmica y culturalmente no es argumento suficiente para justificar un
tipo de violencia especfica, cuyo albor no es al azar o hace parte de una lgica generalizada
de relacionamiento socialmente aceptado. El bullying homofbico es una violencia
premeditada tanto en sus objetivos como en la definicin de sus vctimas.
No sin razn Chile, de acuerdo a antecedentes aportados por UNESCO, como vimos
ms arriba, y otras instituciones dedicadas a prestar apoyo psicoemocional a las vctimas
como es la ONG Todo Mejora, presenta no slo las tasas de suicidio adolescente por esta
motivacin ms alta en el mundo, sino la regin del continente donde el bullying homofbico
se presenta con mayor crudeza. Esta realidad desvela que el bullying homofbico en Chile
lejos de desaparecer ha adquirido nuevas formas que se adicionan a las tradicionalmente
conocidas. No obstante, el elemento distintivo que traspasa generaciones y se perpeta en el
tiempo de forma inalterada, marcando con ello una clara continuidad, cuyas marcas se dejan
sentir en la subjetividad y autoestima de los sujetos implicados, es la sistematicidad y
reiteracin de la invisibilizacin de la diversidad sexual y/o genrica del espacio escolar.
La negacin reiterada y la sensacin de no existir es, quizs, el elemento que identifica
a todas las generaciones de chilenos cuya orientacin sexual y/o genrica escapa a los
mandatos heterosexistas. La escuela no slo invisibiliza, desconoce, omite lo diferente, sino
que institucionaliza el fingimiento de una realidad que no es la propia como norma de
comportamiento socialmente aceptado so pena de la marginacin u ostracismo social. Esto es,
la escuela histricamente en Chile no slo ha impuesto la heterosexualidad a travs de sus
discursos y prcticas educativas, sino que ha impulsado a que los sujetos no heterosexuales, a
travs de una serie de artimaas sociales pensadas, diseadas y proyectadas representen una
heterosexualidad que no atenta y perpeta el orden heteronormativo.
Retrayndonos a las expresiones de Eribn (2001), en Chile muchos de los sujetos
LGBTI fingen y representan una heterosexualidad que no es tal y, aquellos que le rodean
fingen que aquello es apenas una representacin que preserva inalterado un orden patriarcal,
sexista pero, sobre todo, homofbico. Sin reparar, por cierto, en lo desquiciante de aquella
prctica y lo deshumano que resulta para un sujeto vivir una vida que no es la propia. En ese
978-84-695-8363-0
82
contexto enajenante, donde todos son vctimas de un orden inhumano que no se importa ni
con las vctimas ni con los victimarios de turno, un costo no menor enfrentan los disidentes,
pues, pese a su lucha por ser reconocidos por la institucionalidad escolar, esta sigue haciendo
cuenta de que todos son o deberan ser heterosexuales. En este sentido, la invisibilizacin ha
sido la marca distintiva que el sistema escolar chileno ha impuesto a todo aquel que es
diferente; especialmente cuando esa diferencia remite a la diversidad sexual o genrica. En
ese contexto, la violencia fsica, la burla, la humillacin pblica no son ms que recursos
disuasivos que sancionan a los transgresores, pero sobre todo perpetan y resguardan la
invisibilizacin. Con todo, el mayor dao que provoca no es la sancin social, sino la
negacin de la condicin de persona de todo aquel que transgreda o atente contra un orden
heterosexista profundamente deshumano.
Siendo ese el marco de una investigacin ms amplia que considera varias fuentes de
de informacin, para los efectos de esta presentacin nos proponemos analizar en perspectiva
histrica las expresiones del bullying homofbico presente en el sistema escolar chileno,
intentando establecer sus continuidades y cambios. Objetivo al que se intenta dar cuenta a
travs de entrevistas semiestructuradas en profundidad a personas que fueron vctima de
bullying homofbico en su paso por el sistema escolar formal y agentes educativos que fueron
testigos de esos hechos de violencia, en el perodo comprendido entre las dcadas 80, 90 y
2000.
Mtodo
Tipo de investigacin
El contexto en el cual se inscribe la presentacin es una investigacin de tipo
cualitativa, es decir, aquella donde se intent descubrir los significados y representaciones
atribuidos por los entrevistados a sus vivencias.
Diseo
En lo que respecta al diseo, las unidades de observacin correspondieron a:
testimonios de personas LGBTI que fueron objeto de bullying homofbico, durante las
ltimas tres dcadas; y relatos de agentes educativos (directivos/as, profesores/as,
inspectores/as, etc.) que fueron testigos de situaciones de bullying homofbico o les toc
lidiar con este tipo de casos desde el punto de vista administrativo o disciplinario. El diseo
utilizado fue una investigacin narrativo-biogrfica, es decir, aquella cuyo inters se centr en
cuestiones subjetivas y asuntos vitales, obtenidos a travs del relato que permiti capturar la
riqueza y detalles de los significados que no podan ser expresados en definiciones,
enunciados factuales o proposiciones abstractas.
Para efectos de esta presentacin, especialmente en lo que dice relacin con los
resultados que se exponen ms adelante, se privilegiaron los testimonios de las personas que
fueron vctimas de bullying homofbico. No se debe olvidar, asimismo, que dado que esta
presentacin es producto de una investigacin que est en desarrollo y considera mltiples
fuentes de informacin, adems de los testimonios de las vctimas, los resultados que se
exponen son provisionales.
978-84-695-8363-0
83
Contexto y participantes
Considerando las caractersticas de la investigacin la modalidad escogida fue el muestreo
opintico, el cual estuvo conformado por las personas entrevistadas vctimas de bullying
homofobico y testigos o informantes claves.
Caracterizacin de la poblacin entrevistada:
1) Los participantes hasta ahora entrevistados son 40 personas, de los cuales 34 se
definen como gays, 1 lesbiana y 5 transgneros.
2) Sus edades se distribuyen de acuerdo al siguiente cuadro:
21 a 30
12
Lesb
-
Gays
11
Trans
1
Gays
13
31 a 40
17
Lesb
1
Trans
3
41 a 50
8
Lesb
-
Gays
7
Trans
1
Gays
3
51 a 60
3
Lesb
-
Trans
-
Educacin Bsica
Lesb
Trans
4
Gays
14
Educacin Media
Lesb
1
Trans
1
Gays
20
Educacin Superior
Lesb
Trans
Urbano
Lesb
1
Trans
5
Gays
3
Rural
Lesb
-
Trans
-
Tcnicas
Las tcnicas empleadas fueron bsicamente la entrevista en profundidad semiestructurada o
pauteada.
Anlisis de la informacin
En el anlisis de la informacin se privilegi el anlisis de contenido y de discurso. En
el primer caso, las unidades de registro fueron: las descripciones de situaciones de
discriminacin y/o violencia, referencias explcitas o implcitas de la diversidad sexual,
nociones y/o representaciones de la misma, manejo por parte de las autoridades de las
situaciones motivadas por el bullying homofbico, entre otros. En el caso del anlisis de
discurso la preocupacin estuvo en el estilo del lxico, la implicacin y connotacin de la
utilizacin de palabras de connotacin homofbica o discriminatoria, el contexto en el que se
construy el texto, los presupuestos o elementos implcitos, etc. A nivel de la pragmtica se
consideraron los actos de habla presentes en el texto, los juicios de valor, etc.
Resultados
De acuerdo a lo que se desprende de los testimonios, hasta ahora recolectados, de las
personas entrevistadas que fueron vctimas de bullying homofbico en su paso por el sistema
escolar formal en Chile se concluye lo siguiente:
978-84-695-8363-0
84
E. Superior
4%
E. Media
50%
E. Bsica
46%
E. Bsica
E. Media
E. Superior
Si bien se constata una continuidad en este tipo de violencia, las expresiones se han
ido matizando. As, si en los 80 el uso de la violencia fsica era frecuente, en los 90 y
2000 esta forma de hostigamiento ha tendido a desaparecer, especialmente en los
sectores urbanos. Coincidente con la masificacin de internet en la ltima dcada, el
ciberbullying se ha incrementado, al punto que todos los entrevistados que acusan
haber sido vctima de bullying homofbico en la ltima dcada, manifiestan haber sido
hostigados a travs de las redes sociales.
2) Respecto del tipo de violencia del que fueron objeto los entrevistados, la distribucin
es la siguiente: i) Violencia fsica, 22 personas; ii) Violencia psicolgica, 40 personas;
iii) y violencia verbal, 40 personas.
Verbal
39%
Fsica
22%
Fsica
Piscolgica
Piscolgica
39%
Verbal
978-84-695-8363-0
85
Conocan
33%
Conocan
Desconocan
Desconocan
67%
6) 34 de los entrevistados (todos gays) manifestaron que se vieron obligados a fingir que
eran heterosexuales. Slo 6 asumieron pblicamente su orientacin y/o identidad
genrica (1 lesbiana y los 5 transgneros).
7) 12 de los entrevistados (gays) manifestaron que se vieron obligados a convertirse en
bullies de otros adolescentes LGBTI vctimas de bullying homofbico, para evitar ser
agredidos.
8) La totalidad de los entrevistados manifest que el establecimiento segua haciendo
cuenta en sus discursos y prcticas cotidianas de convivencia social de que todos eran
o deberan ser heterosexuales. Esta consideracin se repiti an en el caso de los/as
estudiantes que asumieron pblicamente una orientacin sexual y/o identidad genrica
distinta de la heterosexual.
Conclusiones
A modo de conclusin se puede afirmar que ms que la violencia fsica u otras formas
de violencia simblica lo que ms caracteriza al bullying homofbico en Chile, que lo
978-84-695-8363-0
86
978-84-695-8363-0
87
978-84-695-8363-0
88
Resumen
En la investigacin se ha descrito el concepto de conocimiento preciso de la realidad de la
inmigracin como articulador del papel que desempean los mediadores interculturales en
las asociaciones de acogida al inmigrante. El estudio, con metodologa cualitativa, ha
categorizado indicadores mediante observacin participante y entrevistas en profundidad no
estructuradas con el objetivo de conocer mejor el papel de los mediadores interculturales
como posibilitadores de las relaciones positivas entre la familia inmigrante y el entorno
social en el que desempean su labor. El conocimiento preciso de la realidad de la
inmigracin se construye en torno a cuatro ejes que permiten mejorar la red de apoyos entre
las familias inmigrantes y la sociedad de destino mejorando la convivencia, atenuando los
conflictos y fomentando la resiliencia en la familia inmigrante. Es un instrumento de
construccin de ciudadana y recuperacin de la normalidad perdida tras el proceso
migratorio.
Descriptores: Resiliencia, Inmigracin, Mediacin intercultural, Conceptualizacin.
Abstract
In the research the concept of precise knowledge of the immigration reality is described as
articulator of the role of the intercultural mediators in the welcome associations. This
qualitative methodology study has categorized indicators using participant observation and
not structured in-depth interviews with the objective of understand the role of intercultural
mediators facilitating positive relations between the immigrant family and the social
environment in which they carry out their work. Precise knowledge of the reality of
immigration is built around four axes that allow improving the network of support among
immigrant families and the host society improving coexistence, reducing conflicts and
promoting resilience in the children of the immigrant family. It is an important instrument to
construct citizenship and recovery normality loss after the migration process.
Keywords: Resilience, Immigration, Intercultural mediation, Conceptualization.
Introduccin
A diferencia de la corriente anglosajona que estudia la mediacin intercultural como
una gestin del conflicto, se pretende abordar el estudio con un enfoque positivo y resiliente
que incluya estrategias ms diversas, una mediacin sin conflicto, una mediacin
978-84-695-8363-0
89
alternativa, tal y como se entiende en Bush y Folger (1996). Con objeto de conocer mejor el
papel de los mediadores interculturales en el proceso de recuperacin de la normalidad de la
familia inmigrante tras el proceso migratorio, este estudio pretende conocer y analizar cul es
el papel y percepciones de las asociaciones de acogida al inmigrante y de los mediadores
interculturales que en ellas desarrollan su tarea, describiendo los elementos que aportan a la
construccin de la resiliencia e integracin de las familias inmigrantes.
A partir de este propsito se formulan unas preguntas de investigacin que se centran
en torno a: a) las caractersticas de las asociaciones de acogida, b) factores protectores y de
riesgo ms destacados en su funcionamiento, c) cules son las relaciones entre las
instituciones que intervienen en el funcionamiento de la Asociacin, especialmente el
Ayuntamiento y el centro educativo, y d) cules son las caractersticas de las relaciones con
las familias inmigrantes. Para dar respuesta a las preguntas de investigacin se utilizan
indicadores de un marco conceptual apriorstico basado en los conceptos de la resiliencia en la
escuela de Henderson y Milstein (2003) y Henderson (2007) para la parte deductiva,
disendose tambin la estrategia analtica de modo inductivo que permita la emergencia de
conceptos de los datos recogidos.
Mtodo
Se procede a realizar entrevistas informales a la mediadora intercultural y observacin
participante durante un curso escolar. Para comunicar los resultados obtenidos se ha optado
por una aproximacin a la narrativa teortica tal y como se entiende en el trabajo de Auerbach
y Silverstein (2003).
Tabla 1
Detalles de la seleccin muestral del trabajo con la mediadora intercultural
Tipo de dato cualitativo
Entrevistas informales
Entrevista informal seguimiento
Observacin participante
978-84-695-8363-0
90
En la Tabla 2, se detalla el plan de anlisis seguido para dar respuesta a las preguntas de
investigacin y categorizar los datos para llegar al concepto nuclear de conocimiento preciso
de la realidad de la inmigracin, como eje vertebrador del desempeo de los mediadores
interculturales que realizan su desempeo profesional con familias de inmigrantes.
Tabla 2
Modelo narrativo de anlisis de datos cualitativos
FASE PRINCIPAL
1. Haciendo el
texto manejable
2. Escuchando lo
que se dijo
3. Desarrollando
la teora
TAREAS ASOCIADAS
Resultados
El concepto nuclear que ha emergido del anlisis de los datos cualitativos se ha
denominado conocimiento preciso de la realidad de la inmigracin. Este concepto se sustenta
en cuatro categoras: a) conocimiento del proceso migratorio, b) conocimiento de la familia
inmigrante, c) conocimiento del sistema educativo y d) conocimiento del sistema de apoyos.
Pudiera parecer que este concepto viene dado por las propias caractersticas profesionales de
la mediacin intercultural, pero se han encontrado interesantes categoras que ayudan a
entender mejor las interrelaciones entre la familia inmigrante, el centro educativo y el
relevante proceso constructor de la resiliencia.
978-84-695-8363-0
91
978-84-695-8363-0
92
inmigrante para encontrar una solucin ptima que resuelva su situacin en nuestro marco
cultural y social. La gestin emocional parece propiciada por el carcter vocacional de la
profesin de mediador intercultural. Se desarrolla una importante gestin emocional al haber
profundizado en las diferentes realidades de las familias inmigrantes.
La directora sigue atendiendo a todos los que estamos, siempre tiene unas palabras
amables para con alguien, los recuerda a todos, sus nombres y circunstancias
(OB:43:4)
Este mismo conocimiento preciso de la realidad de la familia inmigrante, con las
complejas interrelaciones fruto del conocimiento experto y la profundizacin en la
problemtica de las familias inmigrantes, se traduce en una adecuada gestin de la situacin
escolar de los hijos e hijas inmigrantes.
El conocimiento preciso del entorno escolar
Existe una importante red de apoyos, que la mediadora intercultural conoce, fomenta y
promueve, ayudndole en su gestin de las familias inmigrantes.
Di.: Del colegio le envan tambin las clases extraescolares y le explico qu es por, si
despus del colegio, Z quisiera quedarse, pero claro, enseguida ponen pues el club que
tiene el colegio para el fin de semana, y yo le digo que es gratuito, la nena los viernes y
sbados por la tarde puede ir ya que hacen juegos, son como unos junios pero en el
colegio, lo tienen al lado, tienen un local con un club deportivo y as Z pero que es una
situacin (EI:3:22)
Las soluciones no siempre se resuelven por la flexibilidad del colegio o agilidad de
gestin. La Asociacin tiene recursos para resolver problemas familiares relacionados con el
entorno escolar de los nios y nias de familia inmigrante. El apoyo emocional del mediador
es fundamental ya que adopta la figura de adulto de referencia (Cardona, 2006).
El conocimiento preciso del sistema de apoyos
La labor de la mediacin intercultural necesita de un conocimiento preciso de los
canales de apoyo disponibles en el entorno. El correcto desempeo de la actividad profesional
depende de la gestin diaria que se realice para encontrar un punto de equilibrio entre
instituciones y tcnicos de las mismas implicados.
DI.: Entonces, una de dos, cuando lo hablemos, las llevo a la trabajadora social, la
llamo y le comento la situacin que tenemos, ya que se tienen que escolarizar pero
tenemos el problema del empadronamiento, a ver qu es lo que podemos hacer, y en el
piso que estn viviendo es imposible, porque son varias personas las que viven en el
mismo sitio, y no los dejan (EI:2:63).
La idea de apoyo se convierte en una categora con un peso ms all de la facilitacin de
una red de relaciones entre las diferentes personas e instituciones implicadas en las familias
inmigrantes. El conocimiento preciso de los apoyos articula y posibilita, haciendo ms
fluidas, las relaciones entre inmigrantes y la comunidad local.
978-84-695-8363-0
93
Discusin
La mediacin intercultural tiene un relevante papel como tringulo entre la familia
inmigrante y el centro educativo, tal como apuntan Ros Rojas et al. (2007). El papel del
mediador intercultural es descrito como un elemento adecuado de articulacin entre la familia
inmigrante y la sociedad de acogida en general y, en particular, resulta un excelente vehculo
de gestin de las necesidades de proteccin en el alumnado de familia inmigrante en su
relacin con el centro educativo. El inters por explorar las causas de las situaciones de la
realidad migratoria es el elemento articulador e interrelacionador del conocimiento de la
familia, del sistema educativo, del sistema de apoyos y, en general, del proceso migratorio.
Las categoras que forman la base del concepto de conocimiento preciso de la realidad
migratoria, al estar articuladas por la profundizacin en las causas de las situaciones que
componen cada una de estas cuatro experiencias: apoyos, escuela, familia y proceso
migratorio, permiten generar un clima positivo entre el mediador intercultural y la familia
inmigrante. Este clima positivo, al parecer, se genera con las variadas habilidades sociales que
despliegan en su desempeo profesional, tal y como Llevot (2006) indica.
Algunos de los puntos clave encontrados en el estudio estn relacionados con:
El saber coordinarse y trabajar en equipo
La gestin de la adversidad y la pobreza
Vocacin, empata e implicacin personal
La comunicacin intercultural eficaz
Vila (2005), al hablar de competencia comunicativa intercultural destaca la importancia
de las percepciones y la adaptacin al contexto comunicativo concreto, elementos
relacionados con el desarrollo de las habilidades sociales como parte del proceso de
profundizacin en el conocimiento del problema de la familia inmigrante.
Mi idea es que DI llame a los padres y les hable de estas clases de repaso desde un
punto de vista institucional. DI es muy buena manejando a los inmigrantes por telfono,
tiene incluso un lenguaje adaptado que hace que la entiendan y como es muy apreciada
por la amplia mayora considero que la iniciativa tendr bastante xito (OB:10:3 memo
observacional).
Son fundamentales las competencias cognitivas, comportamentales y afectivas en el
desarrollo de la tarea de mediacin, ya que contribuyen a generar un conocimiento preciso de
la realidad de la migracin. El conocimiento preciso de la realidad de la migracin se propone
como constructo intermedio entre teoras complejas y holsticas como las desarrolladas por
Bartolom et al. (2002) al trabajar el concepto de ciudadana intercultural.
Referencias
Auerbach, C. E., y Silverstein, L. B. (2003). Qualitative data: An introduction to coding and
analysis. Nueva York: New York University Press.
978-84-695-8363-0
94
978-84-695-8363-0
95
Resumen
Los centros pblicos de las Islas Baleares, acogen a la gran mayora de alumnos inmigrantes
escolarizados en ESO. Los alumnos inmigrantes en los centros estudiados suelen tener unos
resultados acadmicos ms bajos que los alumnos no inmigrantes. La hiptesis de trabajo
que se plantea es que los centros pblicos, con gran presencia de alumnos inmigrantes o de
entorno sociocultural bajo, organizan los grupos en dos lneas diferenciadas. Por un lado los
alumnos inmigrantes y alumnos con problemtica sociocultural, donde se concentra la gran
mayora del apoyo del centro y otro grupo en el que estn los alumnos de clase media-alta,
que son en su gran mayora no inmigrantes. Los datos que se presentan se han extrado de las
actas de evaluacin, de los registros de convivencia del centro y de los apoyos dados por el
departamento de orientacin. Los resultados confirman la presencia de dos lneas
diferenciadas, y la poco permeabilidad entre los grupos, sobre todo con respecto a los grupos
de alto nivel.
Descriptores: Segregacin, Integracin Social, xito Acadmico.
Abstract
Public institutions of the Balearic Islands host the large majority of immigrant students
enrolled in ESO. Immigrant students in the studied centers often have lower academic results
than non-immigrant students. The working hypothesis that arises is that public, with great
presence of immigrant students or low socio-cultural environment, organize groups in two
different lines. For one immigrant students and students with cultural issues, this accounts for
the vast majority of support from the center and another group in which students are upper
middle class, who are mostly non-immigrants. The data presented are drawn from the
evaluation minutes, records of living of center and the support given by the guidance
department. The results confirm the presence of two distinct lines, and little permeability
between groups, especially with respect to high level groups.
Keywords: Segregation, Social Integration, Academic Success.
Introduccin
La inmigracin es un hecho real en la escuela espaola. El incremento de los alumnos
extranjeros ha sido constante en los ltimos aos y con mayor incidencia en comunidades
como la Balear (Vidaa 2011). La escuela como primer espacio de socializacin de los de los
978-84-695-8363-0
96
Datos de matrcula para curso el 2009 del Ministrerio de Educacin, Cultura y Deporte.
978-84-695-8363-0
97
representando solo el 9.3% de los alumnos extranjeros matriculados. Por otro lado, en los
centros pblicos, que no requieren ningn tipo de pago por parte de los padres, es donde se
concentra un porcentaje ms alto de los alumnos de frica y Sudamrica (un 62.4% de los
alumnos extranjeros matriculados) 12. Estos datos parecen indicar que el impacto de la
inmigracin en los centros pblicos, es muy alta en alumnos procedentes de clases sociales
poco favorecidas y con recursos econmicos bajos, diferencindose de un grupo de
inmigrantes que tienen capacidad econmica para llevar a sus hijos a un centro privado.
Matricular una alumno en un centro privado (en muchas ocasiones elitista y con
modelos educativos exportados de otro pas) no hace que los alumnos se integren en la
sociedad, si no que ms bien se integra con sus iguales (compatriotas la mayora de los casos),
pasando casi inadvertidos, sobre todo cuando son de culturas cercanas (Capel, H. 2007)
Si bien es cierto que los centros privados de titularidad privada y los centros pblicos
de titularidad privada (los conocidos como centros concertados) suelen tener alumnos
homogneos, o se trabaja con una visin homognea de la educacin, los centros pblicos
reciben una heterogeneidad de alumnado.
Mtodo
Muestra
La investigacin que se presenta tiene un enfoque cuantitativo, a partir de los datos
extrados de dos centros educativos que a nuestro criterio son representativos de una realidad
socioeducativa que se da en las Islas Baleares.
El primer centro educativo, est ubicado en un pueblo eminentemente agrcola de la
isla de Mallorca. Un elemento que lo hace particularmente interesante para la presente
investigacin es la distribucin de la poblacin. Con unos 13.000 habitantes, el porcentaje de
poblacin extranjera procedente de frica es del 18.5% (entre 11 a 14 aos) y 22.13% (entre
15 a 19 aos), mientras que de Sudamrica es del 3.08% (entre 11 a 14 aos) y 4.94% (entre
15 a 19 aos), ms inmigrantes de otros pases o regiones que tiene una representacin mucho
ms baja. As en edades escolares de ESO o de formacin post-obligatoria, el porcentaje de
alumnado inmigrante ronda el 20% de la poblacin, siendo la comunidad Africana la ms
numerosa13.
Por otro lado contamos con los datos de un segundo centro educativo ubicado en un
barrio arrabal de Palma de Mallorca. El centro de educacin secundaria, tiene como zona de
referencia de escolarizacin, centros de primaria de diferentes barriadas. Un centro de
primaria es de una barriada de clase media alta, mientras que dos centros de primaria son de
barriadas de clase media baja y dos centros ms de barriadas marginales de Palma. El nivel de
inmigracin en la barriada ms marginal es alto, y se comparten espacios con otras etnias
(gitanos). El nivel de conflictividad del barrio es muy alto, as como la incidencia del paro y
el riesgo de exclusin social ya que como dice Palomares (2006), la integracin de gitanos y
clases socio-culturales bajas, son la tarea pendiente de educacin espaola.
12
En los cursos 2009, 2008 y 2007 nunca hay una diferencia inferior a 45 puntos de porcentaje entre la escuela
pblica y la privada.
13
Fuente: Institud Balear dEstadstica. Ao 2011.
978-84-695-8363-0
98
Estn en 3 o 4 NO
SI
14
Nacionalidad dicotmico
Espaol
No Espaol
39,7%
44,4%
60,3%
55,6%
Total
40,5%
59,5%
978-84-695-8363-0
99
Es interesante comprobar si los grupos que tienen ms inmigrantes tambin son los
grupos que han perdido ms alumnos en 4 de la ESO (Tabla 2).
Tabla 2
Contingencia Estn en 3 o 4 * Nacionalidad
% Nacionalidad
% dentro de Nacionalidad
Grupo
Espaol
89,20%
No Espaol
10,80%
Espaol
97,80%
No Espaol
2,20%
Espaol
79,70%
No Espaol
20,30%
Espaol
80,20%
No Espaol
19,80%
Espaol
76,90%
No Espaol
23,10%
Espaol
No Espaol
70,00%
30,00%
A
B
C
D
E
F
Estan en 4
Estan en 4
Estan en 4
Estan en 4
Estan en 4
Estan en 4
Nacionalidad
Espaol
No Espaol
26,10%
30,00%
NO
70,00%
Total
26,40%
SI
73,90%
73,60%
NO
10,60%
SI
89,40%
100,00%
89,50%
NO
79,70%
63,20%
75,90%
SI
20,30%
36,80%
24,10%
NO
58,80%
58,80%
58,80%
SI
41,20%
41,20%
41,20%
NO
54,50%
37,00%
50,00%
SI
45,50%
63,00%
50,00%
NO
SI
47,00%
53,00%
38,20%
61,80%
44,00%
56,00%
10,50%
Mit.
N
376
Media
6,16
Desv. tp.
1,7319
Resto de Europa
Mit.
19
5,874
1,2898
frica
Mit.
82
4,178
1,7101
Sudamrica
Mit.
23
4,768
1,617
978-84-695-8363-0
100
Las notas son ms bajas en los inmigrantes que en el resto de los no inmigrantes,
siendo mucho ms baja en el caso de Sudamrica y frica.
Realizando una ANOVA complementada con la prueba benfica de Tukey. Esta
prueba nos revela que existe diferencia significativas entre los diferentes alumnos agrupados
por continentes; F=33,88; p 0,000. La prueba de contraste de Tukey indica que se pueden
establecer dos subconjuntos: frica con Sudamrica (4,178 y 4,768), y resto de Europa con
Espaa (5,874 y 6,160).
Hay que tener en cuenta que las calificaciones dependen en parte del apoyo extra que
algunos alumnos reciben por parte del profesorado que atiende a las necesidades educativas
especiales. Este apoyo no se cuantifica en las notas, quedando la asignatura aprobada o
suspendida aunque haya sido con apoyo o adaptaciones curriculares significativas. Se ha
asignado a cada alumno un valor si a ste no se la ha dado ningn apoyo o ACI, una o dos,
tres o cuatro, cinco o seis o ms de seis apoyos o ACIs. Se ha realizado la prueba de KurskalWallis, para variables ordinales. El resultado de esta prueba nos revela que respecto a los
apoyos o ACIs realizadas existen diferencias significativas en cuanto al continente de
procedencia, 2= 151,51 p 0,000; y los rangos promedios asignados manifiestan que hay
diferencia significativa de los apoyos o ACIs segn el continente de procedencia. As
podemos diferenciar claramente dos grupos: uno frica, 398,65, y otro Espaa, resto de
Europa y Sudamrica 211,72; 232,89 y 207,33.
Como se ve los alumnos africanos reciben la mayor cantidad de refuerzos, cosa que
indica que en el centro se hacen esfuerzos para que el alumnado extranjero pueda
promocionar y tener el ttulo de la ESO. No obstante, como se puede ver en la Tabla 4 el
porcentaje de alumnos africanos y de Sudamrica que pueden promocionar es mucho menor
que el resto de procedencias.
Tabla 4
Contingencia Puede promocionar * Continente
% dentro de Continente
Continente
Puede
Si
promocionar
No
Espaa
72,30%
Resto de
Europa
73,70%
frica
31,70%
Sudamrica
34,80%
Total
64,10%
27,70%
26,30%
68,30%
65,20%
35,90%
Una vez vistas las calificaciones de los alumnos, otro tema que ha interesado ver es el
clima de centro, es decir cmo los alumnos se han comportado en el centro. Para ello se han
recogido las amonestaciones que durante un curso escolar se han pasado a los alumnos,
quedando la distribucin por continentes como indica la Tabla 5.
978-84-695-8363-0
101
Tabla 5
Contingencia Amonestaciones en 4 grupos * Continente
% dentro de Continente
Amonestaciones en 4
grupos
Continente
Total
Resto de
frica Sudamrica
Europa
73,70% 30,50%
47,80% 54,50%
Sin Amonestaciones
Espaa
59,30%
1 Amonestacin
14,10%
5,30% 11,00%
8,70% 13,00%
2-3 Amonestaciones
9,30%
15,80% 11,00%
17,40% 10,40%
4-10 Amonestaciones
9,60%
5,30% 17,10%
26,10% 11,40%
mas de 11 amonestaciones
7,70%
30,50%
10,80%
Total
Resto de
Europa
Espaa
frica
Total
7,541
28
Sudamrica
0
0
5,735
26
31
6,213
21
32
75
12
93
30
Como puede verse, en este centro tambin hay una diferenciacin clara entre un cuarto
y el resto. La media de las calificaciones es un buen indicador de la calidad del grupo. No
obstante se puede ver cmo el grupo C tiene media mayor, habiendo ms alumnos extranjeros
en el grupo B. Esto se entiende porque el grupo C recibe mucho ms apoyo (adaptaciones)
que el grupo B. Si bien es cierto que el nmero de apoyos es similar, en el grupo C se atiende
978-84-695-8363-0
102
a ms personas mientras que en el B pocas personas reciben mucho apoyo y esto afecta
obviamente a la media del grupo. El grupo A solo recibe dos apoyos.
Respecto a la conducta, tambin es significativo que el grupo A no tenga casi
amonestaciones, mientas que el B tenga muchas y el C algunas menos. Hay que tener en
cuenta que las amonestaciones en 4 de la ESO son menores que en otros cursos.
En sendas pruebas de Kurskal-Wallis, para variables ordinales, hechas en 4 curso
respecto a las amonestaciones y los apoyos realizados (adaptaciones), existen diferencias
significativas en cuanto al grupo de procedencia: 2= 10, 94 p 0,004 y 2= 10,51 p 0,005
respectivamente.
Respecto a las amonestaciones los rangos promedios asignados manifiestan que hay
diferencia significativa de amonestaciones segn el grupo de procedencia. As podemos
diferenciar claramente dos grupos: A y C (41,17 y 43,30 respectivamente), y otro el B con
rango promedio de 56,47. Por otro lado los refuerzos o adaptaciones se pueden tambin
diferenciar dos grupos: el A con un rango promedio de 37,35, y el B y C, con rangos
promedio de 50,21 y 52,94 respectivamente.
As se ve cmo un grupo, tanto por alumnado como por conflictividad, como por
resultados acadmicos y apoyos requeridos, es significativamente diferente a los otros.
Discusin
Los datos que se presentan nos confirman que los alumnos inmigrantes comparten de
una forma no igualitaria la escolarizacin. No estn representados de una manera igualitaria
en los diferentes tipos de centros. As en los centros privados casi no hay alumnos inmigrantes
mientras que es la escuela pblica la que acumula la mayor cantidad de alumnos inmigrantes.
En la escuela pblica, si bien todos los alumnos pueden acudir a ella, tambin utilizan
diferentes estrategias para segregar a los alumnos inmigrantes.
Se ha visto que los grupos con alumnos inmigrantes tienen peores calificaciones,
acumulan ms amonestaciones (sobre todo los grupos de africanos y sudamericanos) y
requieren ms apoyo.
Los centros educativos disean lneas en las que casi no hay alumnos inmigrantes.
Seran lo que llamamos lneas de nativos, donde el nivel es superior y se exige ms a los
alumnos, se atiende menos a la diversidad, pero en contrapartida, los alumnos sacan mayores
calificaciones y les permiten mantener un ranquing respecto al resto de centros de la isla
(tanto privados como concertados) muy alto. Adems, esta diferenciacin responde a la
demanda de los padres de los alumnos nativos, que ven como positiva esta medida. Destacar
que los dos centros estudiados, en los cuatro ltimos aos han obtenido la nota ms alta de
selectividad en Mallorca.
Referencias
Ainscow, M. (2003). Desarrollo de sistemas educativos inclusivos. Ponencia presentada en el
Congreso La respuesta a las necesidades educativas especiales en una escuela vasca
inclusiva: San Sebastin, del 29 al 31 de octubre de 2003.
978-84-695-8363-0
103
978-84-695-8363-0
104
Resumen
Desde la implementacin de la Ley 20.084 del 2007 que pretende la articulacin entre el
cumplimiento de condena de jvenes infractores de ley con un modelo socio educativo, en el
cual la educacin deba ser el eje principal, se constata que en la prctica dicha articulacin
no se est llevando a cabo; pues, los profesores que imparten docencia en el CIP CRC de
Talca aplican las mismas estrategias de enseanza - aprendizaje que aquellas que son
utilizadas en el resto de las escuelas y liceos del pas. Es ms, el propio Ministerio de
Educacin no considera las distintas realidades y contextos socio educativos y las
adaptaciones curriculares a la hora de realizar las acciones pedaggicas. En consideracin
a esos antecedentes, la comunicacin tiene como objetivo presentar los resultados parciales
de la evaluacin de las estrategias de enseanza aprendizaje, utilizadas por los(as)
profesores(as) que imparten docencia en el citado centro.
Descriptores: Infractores, Estrategias, Enseanza, Aprendizaje.
Abstract
The implementation of the law n20.084 in 2007 pretended to articulate the pursuant to the
sentence to young people with a socio-educational model. In this model, the education had to
be the core of the system but it has been confirmed that this articulation has not been reached
based on the strategies implemented by CIP CRC teachers from Talca who are using the
same strategies work on the rest of the schools along the country. Furthermore, the Ministry
of Education does not consider the different realities, the socio-education context and the
curriculum adaptations at the moment of delivering lessons. Considering these records, it
presents the first results related to the evaluation to improve the teaching and learning
methodological strategies used by the teachers who work on the place.
Keywords: Ofenders, Strategies, Teaching, Learning.
Introduccin
Desde la implementacin de la Ley 20.084 del 2007 que pretende la articulacin entre
el cumplimiento de condena de jvenes infractores de ley con un modelo socio educativo,
en el cual la educacin deba ser el eje principal de dicho modelo, se puede constatar que en la
prctica dicha articulacin no se est llevando a cabo en los trminos que estableca la ley.
978-84-695-8363-0
105
Esta realidad se puede constatar de modo fehaciente al interior CIP CRC de Talca, puesto
que los profesores que imparten docencia a los jvenes infractores de ley privados de libertad
aplican las mismas estrategias de enseanza - aprendizaje que aquellas que son utilizadas en
las escuelas y liceos que imparten educacin formal en establecimientos de distinta
dependencia (escuelas municipalizadas, particular subvencionadas y particulares pagadas).
Es ms, el propio Ministerio de Educacin (MINEDUC) no considera las distintas realidades
y contextos socio educativos y las adaptaciones curriculares a la hora de realizar las
acciones pedaggicas.
Otro elemento interviniente es la falta de capacitacin de los profesores para el trabajo
con personas privadas de libertad. Es decir, el organismo encargado de velar por los derechos
de los(as) nios(as) y del cumplimiento de las sanciones para jvenes infractores de ley,
Servicio Nacional de Menores (SENAME), institucin responsable del cumplimiento de la
normativa vigente relativa a las medidas decretadas por los tribunales competentes, no realiza
un adecuado proceso de induccin para contextualizar las acciones pedaggicas a esas
realidades particulares. Sin contar que, en su mayora, los profesores contratados para impartir
docencia son profesionales recin egresados, mayoritariamente de universidades privadas.
Instituciones sin una trayectoria institucional reconocida en el mbito pedaggico. Asimismo,
dado el sistema de financiamiento estatal entregado a travs subvenciones escolares, no hay
inters por parte de los sostenedores privados y/o pblicos (municipales) de asumir la
administracin y funcionamiento de los establecimientos educacionales al interior de los
centros privativos de libertad.
Este escenario incide en que los paradigmas y enfoques curriculares, y las
correspondientes estrategias de enseanza aprendizaje (manejo de contenidos, las
metodologas, tipos de evaluaciones y materiales didcticos) a los que se adhieren los
profesores que imparten docencia a los jvenes infractores de ley privados de libertad del CIP
CRC de Talca, no sean los ms apropiados para este tipo de jvenes; adems de la
incongruencia entre los paradigmas y enfoques curriculares declarados, y las estrategias de
enseanza aprendizaje seleccionados para la realizacin de clases.
Siendo se el contexto en el que se inscribe la investigacin, el objetivo propuesto es
analizar la asociacin entre paradigmas y enfoques curriculares, y las estrategias pedaggicas
de enseanza aprendizaje, entendiendo par tales: los contenidos, las metodologas, tipos de
evaluaciones y materiales didcticos utilizados en la realizacin de clases por parte de los
profesores que imparten docencia a jvenes infractores de ley privados de libertad en el
Centro Internacin Provisorio y Centro de Rgimen Cerrado (CIP - CRC) de Talca durante el
ao 2013.
Reinsercin social
Una sociedad es equitativa cuando asegura la igualdad de oportunidades, es decir,
cuando no se limita a respetar la igualdad de las personas ante la ley, sino que tambin
promueve la supresin de las barreras econmicas y sociales, o la compensacin de las
desigualdades que ellas generan y que impiden o dificultan la realizacin del potencial
individual (Atria,2004). Si se observa el tratamiento que los medios de comunicacin dan a
la juventud, se puede advertir la vigencia de un discurso que la sataniza y estigmatiza,
particularmente a los sectores ms pobres, instalando de esta forma la percepcin de miedo e
inseguridad en el imaginario social. As, las exclusiones provocadas por el modelo, se
interponen a la viabilidad de una integracin protagnica de los jvenes en la sociedad
978-84-695-8363-0
106
(Molina y Romero, 2003). Para Molina y Romero (2003), la estigmatizacin de que son
objeto estos jvenes, estara a la base de la apata y el rechazo hacia toda intencin de
insertarlos, ya que nunca han estado insertos, en tanto desde su cotidianidad son testigos del
rechazo, el prejuicio y la sobrevigilancia que generan sus actos.
Para el Servicio Nacional de Menores, el logro de la reinsercin social de
adolescentes infractores es un objetivo central. Esta entidad define la reinsercin social
como la accin educativa compleja e integral, que busca limitar los efectos de la sancin y
ejecutar acciones de responsabilizacin, reparacin, habilitacin e integracin del/la
adolescente. El eje central del cumplimiento de una sancin con programa de reinsercin
social para los jvenes infractores de ley es la educacin, es por esto que la incluye como
eje articulador de todos sus programas (SENAME, 2007).
Desafos de la educacin
La educacin ha sido considerada por mucho tiempo el eslabn privilegiado para
articular la integracin cultural, la movilidad social y el desarrollo productivo. De esta
forma, se argumenta que tener educacin permite acceder a mejores trabajos, y participar en
las redes en que circula el conocimiento. Por el contrario, carecer de ella implica quedar
restringido a ocupaciones de baja productividad y bajos salarios, privado de gran parte del
intercambio cultural (Hopenhayn, 2003). Las posibilidades de los distintos grupos para
llevar a cabo sus proyectos de vida segn sus propios valores y visiones del mundo,
dependen en importante medida de la cantidad y calidad de la educacin a la que puedan
acceder. En este sentido, existe una correlacin positiva entre ms educacin y ms equidad,
lo que quiere decir que los pases con logros escolares ms difundidos tambin tienen
menores diferencias de ingresos y son ms igualitarios en su estructura social. Sin embargo,
actualmente existen fuertes disparidades de logros educacionales (tanto en nmero de aos
estudiados como en calidad del aprendizaje) por grupos de ingreso, que condenan a la
reproduccin de las inequidades sociales (Hopenhayn, 2003).
En el caso de Latinoamrica, un alto porcentaje de sus habitantes tiene un escaso
acceso a la educacin, en donde muchos nios no terminan la escuela primaria y la mayora
de los jvenes provienen de familias cuyos padres poseen menos de diez aos de educacin
formal, lo que los hace especialmente proclives a no alcanzar el nivel educativo requerido
para sortear la pobreza (CEPAL, 2000; citado en Hopenhayn, 2003). En este sentido, el
escaso nivel de educacin de los jvenes bloquea su principal canal de movilidad e
inclusin social, por lo cual estos ven restringidas sus oportunidades futuras ya en su hogar
de origen, puesto que el nivel educativo de los padres, variable determinante del clima
educacional del hogar, aparece altamente correlacionado con las trayectorias educacionales
de los hijos (CEPAL-OIJ, 2004; citado en Machineay Hopenhayn, 2005).
Dentro de este contexto, Chile es el pas que presenta los mayores ndices de
desigualdad social dentro de Latinoamrica, desigualdades que son explicadas por los
diferentes niveles de educacin dentro de la poblacin (Bever, 2000). Por lo tanto, la
educacin constituye una va para disminuir las brechas existentes entre los distintos grupos
sociales de nuestro pas, y de esta manera acabar con la exclusin de los sectores ms
vulnerables, para lo cual debe elevar la calidad de la educacin, generando mejores y ms
equitativas posibilidades a personas de menores recursos econmicos (Aedo, 2003).
978-84-695-8363-0
107
978-84-695-8363-0
108
978-84-695-8363-0
109
Contexto y participantes
La seleccin de la muestra correspondi a los profesores que imparten docencia a los
jvenes infractores de ley privados de libertad del CIP CRC de Talca. Actualmente son 08
profesores que atienden tanto a la enseanza bsica como la enseanza media. La mayora de
los profesores contratados son profesionales recin egresados, mayoritariamente de
universidades privadas. Universidades que carecen de una trayectoria institucional reconocida
en el mbito pedaggico.
Tcnicas e instrumentos de recoleccin de la informacin
Las tcnicas seleccionadas para la recoleccin de informacin fueron:
a) Entrevistas semiestructuradas a los profesores que imparten docencia a los jvenes
infractores de ley privados de libertad del CIP CRC de Talca durante el ao 2013.
b) Observacin de las prcticas pedaggicas de los profesores que imparten docencia a
los jvenes infractores de ley privados de libertad del CIP CRC de Talca durante el
ao 2013.
c) Anlisis documental de las planificaciones, evaluaciones y orientaciones tcnicas
emanadas del SENAME para el trabajo con jvenes infractores de ley.
Anlisis de la informacin
Dadas las caractersticas de las tcnicas escogidas se privilegi el anlisis de contenido
en el caso de las entrevistas y el anlisis documental en lo que respecta al material emanado
del SENAME para el trabajo pedaggico con jvenes infractores de ley.
Resultados
Entre los principales hallazgos de la investigacin, luego de haber aplicado los instrumentos
tenemos:
a) Los profesores que imparten docencia al interior del CIP CRC de Talca utilizan las
mismas estrategias de enseanza aprendizaje, entendiendo por tales: contenidos,
metodologas, tipos de evaluaciones y materiales didcticos que aquellas que,
normalmente, se aplican en establecimientos educacionales pblicos y privados
nacionales con estudiantes que no tienen ninguna medida aflictiva.
En este sentido, ni el propio MINEDUC considera un currculo diferenciado para este
tipo de estudiantes. Sugiere se apliquen los mismos contenidos que se ensean en las
escuelas y liceos tradicionales.
b) De lo observado y de acuerdo a lo que se desprende de las entrevista los profesores
que imparten docencia en el establecimiento antes sealado, no recibieron ningn tipo
de capacitacin y/o induccin especial para el trabajo con este tipo de estudiantes, ni
se consideraron las condiciones conductuales o de privacin de libertad de los
mismos.
978-84-695-8363-0
110
c) Otra de las limitantes observadas es que en su mayora los profesores que imparten
docencia son profesionales recientemente egresados. La totalidad de ellos no lleva ms
de dos aos de egreso de la universidad.
Dada su falta de experiencia se evidencian problemas en el manejo de grupos,
adaptacin al trabajo en condiciones especiales, dada su juventud carecen de
ascendiente y autoridad ante los jvenes infractores de ley privados de libertad entre
otras situaciones. Todo anterior incide en que halla una alta rotatividad de profesores
en el trabajo en aula al interior del centro.
d) El sistema de financiamiento estatal entregado a travs subvenciones escolares, no
resulta interesante para los eventuales sostenedores privados y/o pblicos
(municipales) que quieran asumir la administracin y gestin del CIP CRC de
Talca.
Un aspecto que dice relacin con este desinters son los bajos salarios que reciben los
profesores para el trabajo con este tipo de estudiantes.
Conclusiones
En trminos generales, es posible plantear que los educadores de los centros privativos
de libertad de SENAME, poseen bajas expectativas con respecto a los logros educacionales de
los adolescentes infractores, las que se han ido modificando de acuerdo al tiempo que
transcurre desde que inician su labor en el centro. Estas bajas expectativas estn relacionadas
principalmente con las dificultades de funcionamiento de SENAME, en el sentido de no
proporcionar los recursos necesarios para que esta labor se lleve a cabo de forma adecuada.
Asimismo, se relacionan con creencias acerca del origen sociocultural de los adolescentes, en
donde la mayora de stos son percibidos como sujetos carenciados, que no poseen las
condiciones psicosociales mnimas para incorporar los elementos de intervencin educativa
que se les brinda y sacar provecho de ellos. Como consecuencia de lo anterior, las prcticas
pedaggicas se orientan principalmente a la generacin de hbitos de higiene y alimentarios,
mantencin de la convivencia y ocupacin del tiempo libre de los adolescentes, generando un
reducido impacto en el cambio actitudinal que stos pudiesen presentar. En este marco, la
adquisicin de competencias tcnicas adquiere mayor importancia que la promocin del
desarrollo afectivo y social de los adolescentes, dando cuenta de la poca adecuacin y
pertinencia de las intervenciones educativas, ya que no son abordados los aspectos que estn a
la base de las conductas delictivas. De esta forma, las posibilidades de que la educacin
facilite o promueva la reinsercin social de estos jvenes son prcticamente nulas. Derivado
de lo anterior, las expectativas de reinsercin social que poseen los educadores sobre los
adolescentes infractores son bajas, no existiendo expectativas acerca de los logros
educacionales de los adolescentes, ni de la posibilidad de que stos logren construir un
proyecto de vida distinto al delito. Esto influye directamente en las prcticas pedaggicas que
desarrollan, en donde prima la frustracin y la desesperanza, asociado a creencias de poca
efectividad acerca de s mismos. Por otro lado, a pesar de que la nueva Ley de
Responsabilidad Penal Juvenil ha sido diseada desde altas esferas polticas, como un nuevo
programa de reinsercin social sin ser coercitiva por caractersticas propias, sta no se puede
definir formalmente como una poltica pblica, sino como una poltica de Estado. Esto debido
a no tomar en cuenta ni en su concepcin, diseo, creacin e implementacin a uno de los
principales actores sociales de los contextos de encierro de jvenes infractores de ley, los/as
educadores/as. Asimismo, las caractersticas del malestar docente se hacen vigentes en los/as
978-84-695-8363-0
111
978-84-695-8363-0
112
Resumen
Esta comunicacin presenta resultados empricos sobre la preferencia relacional del
alumnado en la Educacin Secundaria Obligatoria. Mediante el instrumento Escala de
Preferencias Relacionales de Gnero se indaga en las predisposiciones del alumnado a elegir
o rechazar a chicos o chicas segn el tipo de actividad conjunta a desarrollar. Segn las
elecciones o los rechazos constatados podemos conocer acerca de la presencia de los
mandatos de gnero en las aulas escolares. La muestra se compone de 722 estudiantes
(chicas y chicos = 50%) de E.S.O. de la provincia de Sevilla. El error muestral es de 3,7%
con un nivel de confianza del 95,5% con la mxima varianza proporcional (p = q). Los
resultados muestran algunas pautas de eleccin segn el gnero, observndose que las chicas
son ms elegidas para compartir secretos o los chicos para practicar deporte, lo que nos
permite concluir sobre la presencia en la escuela de los mandatos de gnero patriarcales.
Descriptores: Sentimiento Relacional, Gnero, Educacin Secundaria Obligatoria, Roles de
Gnero, Coeducacin.
Abstract
This paper presents empirical results on relational preference of students in secondary
education. The instrument Relational Scale for Gender Preferences explores students'
predispositions to choose or refuse to boys or girls under the joint activity to develop.
According to the observed choices or rejections can know about the presence of gender
mandates in the classroom. The sample consists of 722 students (girls and boys = 50%) of
ESO in the province of Seville. The sampling error is 3.7% with a confidence level of 95.5%
with maximum variance method (p = q). The results show some patterns of choice by gender,
showing that girls are chosen to share secrets or the kids to play sports, allowing us to
conclude about the presence in the school of patriarchal gender mandates.
Keywords: Feeling Relational, Gender Issues, Secondary Education, Gender Role,
Coeducation.
Introduccin
Este trabajo se integra dentro del proyecto de excelencia TEN XXI: Creacin de
recursos online para el conocimiento y difusin de la cultura de gnero en la escuela (P06HUM-0148) del grupo de investigacin DIME: Desarrollo e Innovacin de Modelos
978-84-695-8363-0
113
Educativos (HUM-833). Se relaciona con una de las lneas prioritarias de actuacin del I Plan
de Igualdad entre Hombres y Mujeres en Educacin (BOJA nm. 227 de 21 de noviembre de
2005), la cual pretende promover cambios en las relaciones de gnero. Este Plan de Igualdad
se propone la sensibilizacin del alumnado, profesorado y de las madres y los padres en
relacin con la igualdad y la coeducacin con el fin de construir una cultura de gnero en la
escuela.
En este sentido, un estudio sobre actitudes del alumnado hacia la igualdad de gnero
(Garca-Prez, Rebollo, Buzn, Gonzlez-Pial, Barragn-Snchez y Ruiz-Pinto, 2010)
muestra que el alumnado obtiene sus medias ms bajas en el plano relacional, donde se
acumulan las mayores diferencias entre chicos y chicas. Otros estudios han encontrado
tambin diferencias significativas entre chicos y chicas en la configuracin de las relaciones
amistosas que se empiezan a establecer en la infancia y que continan durante la adolescencia,
surgiendo antes en el tiempo en las chicas que en los chicos (Navarro-Pertusa, 2004; Feiring,
1999). En concreto, Navarro-Pertusa (2004) seala que el establecimiento de relaciones
amistosas entre personas de distinto sexo en la infancia y adolescencia supone un aprendizaje
de habilidades relacionales tales como la negociacin y la resolucin de conflictos. Por su
parte, Feiring (1999) observ que las personas que haban referido mayor nmero de
amigos/as del sexo contrario en su infancia disponan de mejores capacidades y destrezas para
las relaciones de pareja, al haberse socializado en la confianza, la reciprocidad y el apoyo
mutuo durante sus interacciones y relaciones amistosas. Estos estudios ponen el acento en
cmo se relacionan las chicas y los chicos como consecuencia de la socializacin diferencial
de gnero.
Bosch, Ferrer y Alzamora (2006) han apuntado que la clave de la socializacin est en
la asignacin diferencial de actividades y roles a hombres y a mujeres, de manera que se
construyen categoras independientes y claramente opuestas con lo que es propio de los
chicos y lo que es propio de las chicas. Desde que nacemos recibimos estmulos y
aprendemos qu est bien hacer y qu no est bien hacer. Este aprendizaje se basa en las
exigencias sociales y reproduce los modelos de masculinidad y feminidad universales,
dicotmicos y opuestos entre s (Rebollo, 2006; Lagarde, 1996; Simn, 2010): lo
naturalmente masculino y lo naturalmente femenino. En la sociedad patriarcal los valores
considerados propiamente masculinos (dureza/fuerza, actividad, autoridad, no sensibilidad,
libre de responsabilidad en el cuidado de los/as dems, etc.) y los considerados propiamente
femeninos (debilidad/ternura, pasividad, aceptacin/sumisin, sensibilidad, responsable del
cuidado de los/as dems, etc.) se han venido conservando desde hace dcadas. As, en el
sistema patriarcal el estereotipo femenino, es decir, todo aquello que se espera de las mujeres
por el hecho de serlo, y el estereotipo masculino, es decir, todo aquello que se espera de los
hombres por pertenecer a ese sexo, se sustentan en diferentes lgicas. En esta tradicin
androcntrica, a las mujeres se les exigen que sigan la lgica del cuidado y a los hombres se
les pide la lgica de la competicin. Estas lgicas tienen un carcter desigual, mientras que la
lgica del cuidado tiene como premisas la unin y la relacin con las personas, la lgica de la
competicin se basa en la separacin e individualidad de las personas.
El mandato de gnero basado en el cuidado y bienestar ajeno plantea a las mujeres el
desarrollo de ciertas capacidades como la dedicacin a los/as dems, la responsabilidad, el
sacrificio, la dependencia, la sensibilidad, la emocionalidad, la sumisin, etc. Lagarde (2000)
afirma que las mujeres se conforman como seres-para-otros y de ah que depositemos la
autoestima en los otros y, en menor medida, en nuestras propias capacidades como
consecuencia de la interiorizacin de estos mandatos. Por su parte, el mandato de gnero
978-84-695-8363-0
114
basado en el xito y la competicin (Bonino, 2000; Sau, 2000) plantea a los hombres la
exigencia social de mostrar ciertas cualidades tales como individualidad, seguridad y
confianza en s mismo, fuerza, racionalidad, independencia, la dureza/resistencia, no
emocionalidad, autoridad, etc. (Cortina, 1998; Bosch, Ferrer y Alzamora, 2006). Olavarra
(2004) afirma que este proceso de hacerse hombres se logra demostrando ciertas cualidades
y atributos que se adquieren a travs de diversos ritos y prcticas de iniciacin, es decir, los
hombres deben superar ciertas pruebas como es estar por encima de la frustracin y del dolor,
conocer mujeres y mantener un contacto puramente sexual con ellas, saber usar la fuerza,
tener un trabajo remunerado, etc.
Lomas (2007) recoge las caractersticas que definen al modelo dominante de
masculinidad: la masculinidad es sinnimo de oposicin a lo propio de las mujeres, el valor
de la masculinidad depende del ejercicio de la fuerza y del grado de poder, riqueza y xito de
cada hombre, el ejercicio de la masculinidad exige el control de las emociones y la ocultacin
de los sentimientos. Este mismo autor contina argumentando que en la tribu masculina, los
afectos y las emociones no se valoran y se consideran un sntoma de debilidad y de una
virilidad insuficiente.
Frente a este modelo de liderazgo masculino basado en el individualismo, la
competicin y la fuerza, la autoridad de las mujeres se apoya en la comunicacin, el apoyo
mutuo y el reconocimiento recproco con el fin de lograr modificar el dominio patriarcal de
las sociedades y la violencia que en ste se sustenta (Maeru, 2007; Maeru, 1999; Chaves,
2002; Lagarde, 2006). Ante esta situacin de pacto entre los hombres y exclusin de las
mujeres, stas han optado por acogerse a la sororidad o soridad que propicia la confianza, el
apoyo mutuo y el reconocimiento recproco de la autoridad entre las mujeres, contribuyendo a
la eliminacin social de todas las formas de opresin (Lagarde, 2006). Este pacto ayuda a
aprender a actuar libre de la influencia del estilo patriarcal que domina el desarrollo de las
sociedades, a reconocer nuevos conocimientos, habilidades y destrezas que hasta el momento
carecan de valor; y a construir la alianza entre las mujeres desde una posicin poltica de
gnero.
En la actualidad, se aspira a alcanzar la igualdad entre hombres y mujeres, lo que
supone el establecimiento de relaciones igualitarias basadas en el respeto y el dilogo, a travs
de la transformacin de la dinmica relacional basada en la asimetra, el poder y la
dominacin. A sabiendas de que un perodo importante en la construccin de la identidad
personal es la adolescencia, resulta prioritario intervenir con los y las adolescentes
(correspondiente al alumnado de Educacin Secundaria Obligatoria) para saber qu tipo de
relaciones establecen con sus iguales y si stas se ven influenciadas por los mandatos sociales
de gnero. Para ello, este estudio se propone como objetivo general conocer las relaciones que
establece el alumnado de Educacin Secundaria en funcin del gnero; y de manera ms
especfica, se pretende conocer las preferencias relacionales de gnero del alumnado en
funcin de tipos de actividad.
Mtodo
Se aplica un diseo descriptivo ex post facto para el estudio de las preferencias
relacionales de gnero del alumnado, observando diferencias en la eleccin y rechazo de
alumnado segn tipo de actividad. En el estudio participan 722 estudiantes (50% de chicos y
50% de chicas) de Educacin Secundaria Obligatoria, con edades comprendidas entre los 11 y
los 18 aos, procedentes de 10 centros educativos de la provincia de Sevilla. Este tamao
978-84-695-8363-0
115
muestral permite trabajar con un error de 3,7% para un nivel de confianza del 95,5% con la
mxima varianza proporcional (p=q). La muestra se ha seleccionado siguiendo un
procedimiento de muestreo aleatorio estratificado (zona geogrfica en que se ubica el centro
educativo: zona urbana, zona peri-urbana y zona rural) y por conglomerados (aulas: gruposclase naturales existentes en los centros educativos).
En este estudio se aplica una prueba sociomtrica, en concreto, una escala de
preferencias relacionales de gnero, la cual se estructura en cuatro grandes preguntas: para
qu elegiras a una chica de tu clase, para qu elegiras a un chico de tu clase, para qu no
elegiras a una chica de tu clase y para que no elegiras a un chico de tu clase. Estas preguntas
incluyen un rango de respuestas que abarcan distintas actividades: tener una relacin de
pareja, estudiar juntos/as, compartir un secreto, sentarnos juntos/as en la clase, prestarnos la
ropa, ordenar y limpiar, practicar un deporte juntos/as, jugar a un videojuego, ser delegado/a
de la clase, e ir de acampada. Para el diseo de esta escala se han contemplado actividades
propias de esta etapa de edad, as como los mandatos sociales de gnero. Por tanto, esta
prueba sociomtrica pretende explorar las preferencias de eleccin y rechazo de chicos o
chicas en funcin de diferente tipo de actividades. Los resultados derivados de esta escala se
interpretan siguiendo los siguientes rangos: 0 - < 20%, puntuaciones muy bajas; 20% - <
40%, puntuaciones bajas; 40% - < 60%, puntuaciones moderadas; 60% - < 80%,
puntuaciones altas; 80% - 100%, puntuaciones muy altas.
Para la realizacin del trabajo de campo se sigue un procedimiento de accin
concertada con los centros educativos, presentando la iniciativa a los equipos directivos y
acordando su inclusin dentro del Plan de Igualdad de los centros. Para analizar los datos se
ha utilizado el programa estadstico SPSS, a travs del cual se ha realizado un anlisis
descriptivo de los mismos.
Resultados
En las opciones sobre eleccin de la Escala de Preferencias Relacionales de Gnero,
los resultados nos indican que las chicas son elegidas en un alto porcentaje para sentarse
juntos/as (77%), estudiar juntos/as (73,3%) y compartir un secreto (69,3%), mientras que los
chicos lo son para sentarse juntos/as (70%), practicar deporte (66%), jugar a videojuegos
(66,4%) y estudiar juntos/as (61,6%). No se observan diferencias globalmente en la eleccin
de chicos o chicas en cuanto a actividades marcadas por el contexto escolar como es estudiar
juntos/as o sentarse juntos/as. Sin embargo, estos resultados muestran algunas pautas de
eleccin distintas segn el gnero, observndose que mientras las chicas seran elegidas en un
alto porcentaje para compartir secretos, los chicos lo seran para practicar deporte o jugar a
videojuegos. Por otro lado, en las opciones sobre rechazo de la Escala de Preferencias
Relacionales de Gnero, los resultados muestran que la actividad con un porcentaje ms alto
de rechazo tanto en chicas como en chicos es la de tener una relacin de pareja con un 61,4%
y un 67,2% respectivamente. Tambin podemos observar que otras actividades en las que
tanto chicos como chicas son rechazados/as en un porcentaje moderado son la de prestarse
ropa (57,2% y 52,6%) y ordenar y limpiar (51,7% y 48,8%). Estas actividades parecen
percibirse como ms propias de otras esferas y escenarios y quiz de ah el que sean
rechazadas como actividad a realizar tanto por chicos como por chicas. Otras actividades que
obtienen un porcentaje moderado de rechazo en las chicas es jugar a videojuegos (40%) y en
los chicos es compartir un secreto (46,6%) y ser delegado de clase (43,2%). Aunque
globalmente los resultados obtenidos por las chicas y los chicos para el desarrollo de algunas
978-84-695-8363-0
116
actividades son semejantes, se observan diferencias de gnero en algunas otras como son la de
jugar a videojuegos y compartir secretos.
Los resultados anteriormente detallados sugieren la necesidad de realizar un anlisis
ms pormenorizado sobre las preferencias relacionales de gnero. Para ello, resulta de gran
valor conocer no slo los porcentajes de eleccin y/o rechazo que reciben chicos y chicas en
cada tipo de actividad sino tambin conocer por parte de quines son elegidos o rechazados.
En este sentido, los resultados muestran que los porcentajes de elecciones mutuas de chicas
entre s y de chicos entre s son ms altos que los porcentajes de elecciones cruzadas (chicachico y chico-chica). De este modo, las chicas se eligen mutuamente para sentarse juntas
(89,2%), compartir un secreto (80,6%), estudiar juntas (78,8%) e ir de acampada (67,3%). Por
su parte, los chicos se eligen mutuamente para jugar a videojuegos (84,5%), practicar deporte
(78,1%), sentarse juntos (72,5%) y estudiar juntos (64,5%). En relacin con las actividades
para las que chicas y chicos prefieren no elegirse mutuamente, observamos que la actividad
con ms alto porcentaje en la que las chicas no se elegiran entre s es la de prestarse ropa
(69,8%), seguida por ordenar y limpiar (56,5%) y tener una relacin de pareja (51,6%),
mientras que los chicos no se elegiran entre s para prestarse ropa (68,9%), seguida por la de
tener una relacin de pareja (61,8%) y compartir un secreto (56,6%).
En general, estos resultados muestran que tanto chicos como chicas no se elegiran
para actividades que pueden considerar ms propias del espacio privado o ntimo (tener una
relacin de pareja, prestarse ropa, compartir secretos, ordenar y limpiar, etc.), no
observndose diferencias destacables entre chicos y chicas en cuanto a las actividades para las
que no se elegiran. De este modo, las chicas no elegiran a las chicas de la clase para
prestarse ropa (69,8%) y no elegiran a los chicos de la clase para tener una relacin de pareja
(72,9%). Por su parte, los chicos no elegiran a los chicos de la clase para prestarse ropa
(68,9%) y no elegiran a las chicas de la clase para tener una relacin de pareja (72,2%).
Los porcentajes nos permiten establecer un ranking de importancia del rechazo en el
marco del conjunto de la actividades, de este modo, la primera actividad relacional que
muestra mayor grado de rechazo en la red social del aula se refiere a establecer relaciones de
pareja inter-gneros (72,2% de los chicos rechazan a los chicas, hacindolo en equivalente
cuanta que la chicas a los chicos 72,9%). Sin embargo las chicas (51,6%) hacen menos
hincapi en el rechazo a la pareja intra-gnero que los chicos (61,8%). Tambin la actividad
relacional de prestarse la ropa entre alumnado del mismo gnero encuentra altos niveles de
rechazo (un 68,9% de las chicas rechazan a las chicas y un 68,9 de los chicos rechazan a los
chicos del aula para dicha actividad). Por su parte, la tercera actividad ms rechazada es la de
ordenar y limpiar especialmente entre las chicas (56,5%), lo que nos hace interpretar que la
red social del aula rechaza ms expresamente las conductas relacionales que no consideran
propias del contexto escolar y acadmico, sino que las ven como ms apropiadas en el mbito
personal.
Por el contrario, los aspectos menos rechazados por chicos y chicas son la prctica
deportiva en el plano inter-gneros (26% de rechazo de las chicas hacia los chicos y 30,2%
de rechazo de los chicos hacia las chicas); y, as sucede tambin con la actividad ir de
acampada (34,7% de rechazo de las chicas hacia los chicos y 29,3% de rechazo de los chicos
hacia las chicas). Sin embargo, conviene destacar que entre los bajos rechazos diferenciales de
chicos hacia las chicas y chicas hacia los chicos se reproducen de nuevo tendencias de gnero
muy especficas. As, tiene muy bajo rechazo jugar a videojuegos entre el alumnado (slo el
23,1% de las chicas rechazan a los chicos para esta actividad relacional).
978-84-695-8363-0
117
Complementariamente, slo el 25,8% de los chicos rechaza a una chica para compartir un
secreto y slo el 21,9% las rechaza como compaera de estudio, lo que supone una
diferencia en las actividades menos rechazadas en el plano inter-genero. La interpretacin que
sugiere esta diferencia relacional puede vincularse a una presencia de los estereotipos de
gnero en la asignacin de roles relacionales de gnero por el alumnado a sus compaeros y
compaeras del aula escolar.
Discusin
Este estudio ha permitido explorar la predisposicin de eleccin y rechazo del
alumnado en funcin del gnero y tipo de actividad. As, las diferencias en las preferencias
relacionales de gnero se aprecian tanto en las elecciones como en los rechazos. En cuanto a
las preferencias de eleccin, las chicas son elegidas en un alto porcentaje para compartir
secretos y los chicos para practicar deporte o jugar a videojuegos; sin embargo, las
preferencias de rechazo revelan que las chicas son rechazadas para jugar a videojuegos y los
chicos para compartir un secreto y ser delegado del aula. Estos primeros resultados muestran
la influencia de los mandatos sociales de gnero en la eleccin de un chico o una chica segn
para qu actividades. De manera que el mandato del cuidado y de las relaciones personales
est muy presente en las actividades estudiar juntos/as, compartir un secreto y sentarse
juntos/as; mientras que actividades como practicar deporte y jugar a videojuegos
evidencian la presencia del mandato de competicin y fuerza (Bosch, Ferrer y Alzamora,
2006; Lagarde, 2000; Bonino, 2000; Sau, 2000; Simn, 2010).
Estos datos han podido mostrar cmo los chicos prefieren elegirse entre ellos para
cualquier actividad y tambin las chicas se prefieren entre s, excepto en actividades asociadas
al contexto escolar como es estudiar y sentarse juntos/as. Estos resultados confirman los
hallazgos de otros trabajos (Feiring, 1999; Navarro-Pertusa, 2004), los cuales adems han
sealado las implicaciones que esta falta de relaciones chico-chica tiene en el desarrollo de
habilidades intepersonales y comunicativas. Adems, se ha constatado que los chicos se
eligen mutuamente para jugar a videojuegos y practicar deporte, mientras que las chicas se
eligen mutuamente para estudiar juntas y compartir secretos. Estos resultados muestran
prcticas de sororidad (Lagarde, 2006) entre las elecciones que realizan las chicas a otras
chicas, lo cual supone el establecimiento de lazos afectivos y relacionales entre mujeres que
se apoyan mutuamente; y en este estudio ello se manifiesta en el alto porcentaje que las chicas
se eligen entre s para estudiar juntas, compartir un secreto, sentarse juntas, as como la
creacin de redes o grupos de mujeres para otras actividades como ir de acampada. En el
caso de los chicos, se evidencia la importancia de la mirada y aprobacin de la tribu
masculina (Lomas, 2007), eligindose mutuamente para practicar un deporte y jugar a
videojuegos, actividades basadas en la competicin, la fuerza y la violencia que le permiten
fortalecer relaciones asimtricas y de poder.
Por otro lado, todo el conjunto de las diferencias en los rechazos inter e intra gneros
para segn qu actividades relacionales nos lleva a sospechar la incidencia de valores
patriarcales en las redes sociales del aula, en las cuales el liderazgo femenino y masculino se
ve asociado a los roles tradicionales y mandatos patriarcales que asocian ms competencias
para el afecto y los cuidados a las chicas, as como ms competencia para la competicin y la
fuerza para el alumnado masculino.
En definitiva, los resultados aportados por este estudio muestran la importancia y el
valor de ciertas actividades y planes de actuacin en la escuela, dirigidos hacia la puesta en
978-84-695-8363-0
118
valor de actividades vinculadas al cuidado y el afecto con los chicos, as como al desarrollo de
actividades que favorezcan la autonoma y el protagonismo de las mujeres.
Referencias
Bonino, L. (2000). Varones, gnero y salud mental: deconstruyendo la normalidad
masculina. En M. Segarra y A. Carab (Eds.), Nuevas Masculinidades (pp. 41-64).
Barcelona: Icaria.
Bosch, E., Ferrer, V. A. y Alzadora, A. (2006). El laberinto patriarcal. Reflexiones tericoprcticas sobre la violencia contra las mujeres. Barcelona: Anthropos.
Chaves, C. (2002). Autoridad y mediacin femenina como prctica de la paz. Duoda: Revista
dEstudis Feministes, 23, 65-81.
Cortina, A. (1998). El poder comunicativo. Una propuesta intersexual frente a la violencia. En
V. Fisas (Coord.), El sexo de la violencia. Gnero y cultura de la violencia (pp. 2741). Barcelona: Icaria.
Feiring, C. (1999). Other-sex friendship networks and the development of romantic
relationship in adolescence. Journal of Youth and Adolescence, 28, 495-512.
Garca-Prez, R., Rebollo, M. A., Buzn, O., Gonzlez-Pial, R., Barragn-Snchez, R. y
Ruiz-Pinto, E. (2010). Actitudes del alumnado hacia la igualdad de gnero. Revista de
Investigacin Educativa, 28(1), 217-232.
Lagarde, M. (1996). Gnero y feminismo. Desarrollo humano y democracia. Madrid: Horas y
Horas.
Lagarde, M. (2000). Claves feministas para la autoestima de las mujeres. Madrid: Horas y
Horas.
Lagarde, M. (2006, octubre). Pacto entre mujeres sororidad. Trabajo presentado en las
Jornadas de Pacto de Gnero. Madrid, Espaa.
Lomas, C. (2007). La escuela es un infierno? Violencia escolar y construccin cultural de la
masculinidad. Revista de Educacin, 342(1), 83-101.
Maeru, A. (1999). Autoridad femenina en educacin. Kikiriki, 54, 26-31.
Maeru, A. (2007). La prctica de la autoridad en las relaciones. Crtica, 943, 55-59.
Navarro-Pertusa, E. (2004). Gnero y relaciones personales ntimas. En E. Barber Heredia e
I. Martnez Benlloch (Coords.), Psicologa y gnero (pp. 171-192). Madrid: Pearson
Educacin.
Olavarra, J. (2004). Modelos de masculinidad y desigualdades de gnero. En C. Lomas (Ed.).
Los chicos tambin lloran. Identidades masculinas, igualdad entre los sexos y
coeducacin (pp. 45-63). Barcelona: Paids.
978-84-695-8363-0
119
978-84-695-8363-0
120
Resumen
Esta comunicacin se centra en conocer y comprender las identidades que adopta el
profesorado en relacin con los cambios educativos propiciados por la incorporacin de la
perspectiva transversal de gnero en educacin. La metodologa utilizada es cualitativa
basada en grupos de discusin. La muestra est compuesta por 5 profesoras y 1 profesor de
diferentes centros de Educacin Secundaria de Andaluca, seleccionados por medio de un
muestreo no probabilstico intencional. Los resultados muestran tres tipos de identidades que
adopta el profesorado con respecto al cambio: la identidad feminista reconocida, son
profesoras que estn legitimadas por el grupo y que los cambios han propiciado una
reafirmacin de su compromiso con la profesin docente; identidad feminista cuestionada,
propia de un profesorado en el que se produce un cuestionamiento de su identidad
profesional; e identidad igualitaria en construccin adoptada por un profesorado
sensibilizado con la igualdad que mantiene una postura adaptativa con respecto al cambio.
Descriptores: Equidad de gnero, Identidad del profesorado, Anlisis del discurso.
Abstract
This paper focuses on knowing and understanding the identities that teachers adopt in
relation with the educational changes caused by the incorporation of the transversal
perspective about gender in education. The used methodology is qualitative, based on
discussion groups. The sample was made up of one male and five female teachers from
different Secondary Schools of Andalusia (Spain). They were selected by means of on
intentional non-probabilistic sampling. The results show three types of identities that these
teachers adopted with respect to change: the recognized feminist identity, are teachers who
are legitimized by the group and the changes have caused a reaffirmation of its commitment
to the teaching profession; the questioned feminist identity, teachers who are questioning
their professional identity; and the egalitarian identity in construction, adopted by teachers
who are sensibilized with the equality that maintains an adaptive attitude towards change.
Keywords: Gender equity, Teacher Identity, Discourse Analysis.
Introduccin
En este trabajo, nuestro inters se centra en estudiar las posiciones o identidades que
adopta el profesorado en relacin con los cambios educativos propiciados por la
978-84-695-8363-0
121
978-84-695-8363-0
122
cinco grupos de discusin en los que se debata sobre el plan de igualdad, seleccionados por
medio de un muestreo no probabilstico intencional, utilizando como criterios de seleccin:
haber participado en uno de los grupos de discusin, la naturaleza de sus intervenciones en el
grupo de discusin (cantidad y extensin de su discurso), el valor de sus intervenciones para
el grupo, el reconocimiento y legitimacin de su discurso por parte del grupo y la trayectoria
reconocida en temas de igualdad. Estas muestras no tienen intencin de ser representativas a
nivel estadstico, ni generalizable, ya que su funcin en el estudio es exploratoria, orientada a
comprender y analizar los procesos de cambio educativo relacionados con la igualdad a partir
de las distintas posturas o identidades adoptadas por el profesorado.
Instrumento y procedimiento
Para la realizacin de este estudio, elaboramos una gua de cuestiones que toma como
base las medidas planteadas en el I Plan de Igualdad entre hombres y mujeres en Andaluca,
con el propsito de analizar las concepciones, percepciones y valoraciones del profesorado
encargado del Plan de Igualdad en los centros acerca de la coeducacin y la igualdad, as
como, de analizar los obstculos y dificultades percibidas. Para ello, se le pidi al profesorado
que reflexionaran y debatieran sobre dos cuestiones fundamentales referentes a la valoracin
del Plan de Igualdad y las necesidades educativas.
El discurso del profesorado es grabado en audio y video, y posteriormente es transcrito
siguiendo el sistema de notacin desarrollado por Jefferson (Atkinson y Heritage, 1884;
Sacks, Schegloff y Jefferson, 1974) y adaptado por Cubero (2000). Los grupos de discusin
fueron analizados de acuerdo con un enfoque construccionista social (Crawford y Chaffin,
1997; Crawford, 2006). Para garantizar el criterio de estabilidad y consistencia en la
aplicacin del sistema de categoras, se aplica el ndice de concordancia de Kappa a sendas
codificaciones realizadas por dos observadoras independientes, obtenindose un valor de 0,90
para la categora identidades del profesorado en materia de igualdad.
Resultados y Discusin
En este trabajo nos centramos en conocer y comprender las posiciones o identidades
que adopta el profesorado en relacin con los cambios educativos propiciados por la
incorporacin de la perspectiva transversal de gnero en educacin. Para ello, realizamos un
anlisis en profundidad de las posiciones que adopta el profesorado en relacin con el Plan de
Igualdad se realiza a partir de los 591 enunciados de los 1983 que componen los grupos de
discusin. Este proceso nos permiti identificar tres posiciones diferentes que manifestaba el
profesorado: 1) Feminista Reconocida. Profesoras que viven el plan de igualdad como una
oportunidad para profundizar en los cambios deseados. Venan trabajando en estos temas en
grupos de trabajo y el plan supone un respaldo. 2) Feminista Cuestionada. Profesoras que
asumen el plan como un acuerdo de mximos y plantean su aplicacin en el centro como una
norma obligada. Su recorrido ha sido ajeno al centro y en solitario. No tiene el
reconocimiento ni respaldo de sus compaeros. 3) Igualitaria en construccin. Profesorado
sensibles a la coeducacin y que el plan supone una oportunidad para aprender y
desarrollarse. Sin trayectoria en movimientos de base ni formacin previa en gnero.
Identidad feminista reconocida
Esta forma identitaria aparece en profesoras que han acogido favorablemente el Plan
de Igualdad y son reconocidas en su entorno profesional por su trayectoria y especialidad en
978-84-695-8363-0
123
materia de igualdad. El 45% de las profesoras que han participado en los grupos de discusin
tienen este perfil. Se trata de profesoras que proceden de grupos de trabajo en coeducacin,
con una formacin autodidacta y con participacin en movimientos feministas de base y que a
lo largo de los aos han conseguido ser respetadas y valoradas por sus compaeros en sus
centros. El plan de igualdad supone un factor de empoderamiento, una visibilizacin y un
respaldo a la labor que venan realizando. De los discursos analizados, los desarrollados por
una de las profesoras participantes, Loyola, son expresivos de esta posicin. En este apartado,
presentamos la naturaleza de estos discursos en una situacin de confrontacin y debate de
ideas entre profesorado que asume la responsabilidad de coeducacin en sus centros en un
momento inicial de puesta en marcha del plan. Especficamente, nos centramos en las
estrategias discursivas que utilizan y el tipo de avales (invocaciones) de los que se sirve para
persuadir a sus compaeras y ganar espacio de intersubjetividad en relacin con el tema.
Los extractos siguientes son representativos de sus posiciones y argumentos en
relacin con los temas ms controvertidos en relacin con la aplicacin del Plan de Igualdad
en los centros:
Extracto 1.
978-84-695-8363-0
124
norma obligatoria para todo el centro educativo. El 18% de las profesoras que han participado
en los grupos de discusin poseen este perfil. Se trata de profesoras donde el recorrido y
experiencia adquirida en materia de igualdad y coeducacin ha sido ajeno al centro y en
solitario, de ah que no posean el reconocimiento ni el respaldo de sus compaeros. Este tipo
de identidad se refleja en profesoras como Magdalena. A travs de sus intervenciones, se
refleja que es una profesora con una postura beligerante con los contextos educativos en
relacin con el cumplimiento de las medidas que plantea el plan de igualdad.
En el siguiente fragmento podremos observar el tipo de argumentaciones y estrategias
discursivas que utiliza para intentar persuadir a sus compaeras.
Extracto 2.
947: (Magdalena): En cualquier caso, yo digo conserjera, ea! si se usa mucho, no
est porque no queremos que est, estar, digo conserja porque es una mujer.
Lo que quiero decir es que no es como para que se ra una compaera tuya ni diga: las
cosas de Magdalena ni pase lo que pas, es lo que te quiero decir ()
978-84-695-8363-0
125
978-84-695-8363-0
126
978-84-695-8363-0
127
978-84-695-8363-0
128
Resumen
Estudios a nivel nacional e internacional demuestran que el movimiento feminista es
desconocido para la juventud, mostrando incluso actitudes de rechazo hacia este movimiento
(Carballar, 2009; Valcrcel, 2008; Simn Rodrguez, 2008; Touraine, 2007; Ramsey et al.,
2007; Cacace, 2006; Yago y Paterna, 2005; Twenge y Zucker, 1999; de Miguel, 2008). Fuera
de nuestras fronteras son muchas las investigaciones que han dado cuenta de este fenmeno,
pero en nuestro contexto la investigacin es escasa. Este estudio presenta la primera fase de
una tesis doctoral en la cual se analizan los marcos de interpretacin del fenmeno existentes
y se valida un instrumento para poder trasladar este debate a nuestro contexto. Partimos de
una investigacin descriptiva por encuesta aplicada a 84 estudiantes de Pedagoga y
Magisterio de Educacin Primaria de la Universidad de Barcelona. Los resultados muestran
una clara tendencia a que el alumnado universitario se site en una posicin distante con el
feminismo, aun afirmando estar de acuerdo con los objetivos feministas. Resultados que
coinciden altamente con los obtenidos en otras investigaciones (Zucker, 2004; Ramsey, 2007;
Breen & Karpinski, 2008; Yoder, Tobias & Snell, 2011; entre muchas otras).
Descriptores: Feminismo, Juventud, Actitudes, Validacin Instrumento.
Abstract
Spanish and international research have shown that the feminist movement is unknown to the
youth, showing even attitudes of rejection towards this movement (Carballar, 2009;
Valcrcel, 2008; Simn Rodrguez, 2008; Touraine, 2007; Ramsey et al., 2007; Cacace,
2006; Yago y Paterna, 2005; Twenge y Zucker, 1999; de Miguel, 2008). Many studies have
noticed this phenomenon, but in our country this research is scarce. This study presents the
first phase of a doctoral thesis that examines the phenomenon and validates an instrument to
allow this this discussion in our context. Setting out from a descriptive research survey
applied to 84 Science Education students from University of Barcelona. Our results show
that although the students agree with feminist goals, they do not accept the feminist label.
These results are consistent with international research (Zucker, 2004; Ramsey, 2007; Breen
& Karpinski, 2008; Yoder, et al., 2011; etc).
Keywords: Feminism, Youth, Attitudes, Validation Instrument.
978-84-695-8363-0
129
Introduccin
Esta comunicacin parte de una tesis doctoral aun en proceso y se centra en el desarrollo
y validacin del instrumento de medida de la misma.
Tal y como muchas y muchos autores e investigaciones demuestran desde hace aos, la
juventud criada y educada dentro de una sociedad democrtica y hoy en da dotada de un
marco de referencia legal igualitario parece reticente a identificarse con el movimiento
feminista (Carballar, 2009; Valcrcel, 2008; Simn Rodrguez, 2008; Touraine, 2007;
Ramsey et al., 2007; Cacace, 2006; Yago y Paterna, 2005; Twenge y Zucker, 1999; de
Miguel, 2008). Esto puede deberse a un rechazo explcito hacia el movimiento o bien, tratarse
de una postura ms moderada que, pese a no identificarse como feminista, apoya su ideologa
y su agenda (Berryman-Fink & Verderber, 1985; Renzetti, 1987; Cowan, 1992; Myakovsky
& Witting, 1997; Twenge & Zucker, 1999; Rosell & Hartman, 2001; Aronson, 2003; Reid &
Purcell, 2004; Ramsey et al., 2007; Breen & Karpinkski, 2008; Fitz et al., 2012; entre muchas
otras).
Desde aqu, e intentando presentar una visin del feminismo capaz de dar cabida a los
feminismos existentes, entendemos el movimiento feminista como un movimiento social
cuya meta ms radical, tanto personal como colectiva, an est por alcanzar: un mundo que
sea un lugar mejor no slo para algunas mujeres sino para todas las mujeres, porque ese
mundo sera mejor no solamente para las mujeres, sino tambin para los hombres (Lynne
Segal, 1999:232).
Como la revisin bibliogrfica nos muestra, las creencias, los mitos y las opiniones que la
juventud tiene hacia el feminismo estn estrechamente vinculadas con la concepcin y las
actitudes proyectadas respecto a cinco dimensiones, que son las que conforman el instrumento
aqu presentado:
1. Roles de gnero: La dimensin de roles de gnero trata de mostrar las percepciones
hacia la adecuacin apropiada de hombres y mujeres de los roles de gnero binarios y
heteronormativos. Los puntos de vista no-tradicionales hacia los roles de gnero se relacionan
con una menor creencia en la organizacin binaria del gnero y al rechazo de la imposicin de
los roles de gnero. Investigaciones como las de Renzetti (1987), Cowan et al. (1992),
Morgan (1996), Toller et al. (2004) o Suter et al. (2006) han mostrado que el hecho de que la
juventud presente una conceptualizacin abierta, alternativa o subversiva de los roles
tradicionales de gnero, est un vinculado a unas actitudes ms positivas hacia el feminismo.
2. Objetivos del movimiento: Ser consciente y reconocer la relacin entre los hitos de la
lucha feminista y nuestro avance hacia una sociedad ms justa, as como el reconocimiento de
los vacos que an quedan por conseguir para alcanzar una igualdad real y efectiva entre
mujeres y hombres es de lo que trata dar cuenta esta dimensin. Estos objetivos presentes en
la agenda feminista giran alrededor de temticas tan diversas y multidisciplinares como los
objetivos referentes a la salud de la mujer, a la violencia de gnero, al cuidado de hijos e hijas,
a la equidad econmica, la corresponsabilidad, a la consecucin de derechos legales, a la
elaboracin de polticas con perspectiva de gnero, a la educacin, a los derechos
reproductivos, al respeto de las parejas y familias homosexuales, etc. Las investigaciones de
Myakovsky y Witting (1997), Morgan (1996) y Cowan (1992) muestran la existencia de una
correlacin positiva entre estar de acuerdo con los objetivos que plantea el movimiento
feminista y las actitudes positivas hacia el feminismo.
978-84-695-8363-0
130
978-84-695-8363-0
131
Mtodo
En esta fase de la investigacin pretendemos hacer un estudio diagnstico a travs de una
encuesta sobre las actitudes que la juventud universitaria catalana tiene hacia el feminismo,
basndonos en la adaptacin de dos instrumentos de corte cuantitativo ampliamente utilizados
en la investigacin internacional para detectar las actitudes de la juventud hacia el feminismo;
del instrumento Liberal Feminist Attitude and Ideology Scale (Morgan, 1996) se
seleccionaron y adaptaron 15 tems y 14 tems de Feminist Perspective Scale (Henley et al.,
1998). Tambin se han utilizado en menor medida 7 tems del cuestionario Feminist Identity
Composite (Fisher et al., 2000). A la adaptacin de las escalas se le suma la redaccin de 33
nuevos tems que otra literatura seala y que no aparecen en los cuestionarios ya
mencionados. Adems, tambin se ha adaptado una escala de Myakovsky & Witting (1997)
para detectar el grado de auto-identificacin feminista, as como una pregunta abierta del
cuestionario diseado por Cowan (1992) sobre la opinin sobre movimiento feminista y otra
pregunta abierta sobre los factores que facilitan o dificultan la autoidentificacin feminista a
la juventud universitaria. El instrumento, en su globalidad, consta de 72 tems. De la escala de
actitudes, 15 tems corresponden a la dimensin sobre los roles de gnero; 14 versan sobre los
objtivos feministas; 19 plantean las actitudes hacia las discriminaciones de gnero; 12 hacen
referencia a las actitudes hacia el individualismo o la accin colectiva; y 9 corresponden a las
actitudes hacia la evaluacin del movimiento feminista. Estos tems se plantean en una escala
de tipo Likert de 6 valores (de totalmente en desacuerdo a totalmente de acuerdo).
Participantes
Para la validacin inicial de este instrumento se ha contado con una muestra de 84
estudiantes de la Universidad de Barcelona. 45 provenientes de primer curso del grado de
Magisterio y 39 de primer curso del grado de Pedagoga. De entre el alumnado el 89,3% eran
mujeres, siendo la media de edad de 20 aos. El 94% del alumnado era de origen espaol y el
6% proveniente de otros pases (como Colombia, Venezuela, Suiza o Portugal). Un 95,2% se
declaraba heterosexual, un 3,6% homosexual y 1,2% bisexual. En referencia a la afiliacin
religiosa, el 54,4% se declaraba atea, el 27,7% como creyente no practicante, el 15,7%
agnstica y un 2,4% creyente practicante. El 58,3% de la muestra se identificaba en la
izquierda poltica, un 6% de centro y un 1,2% se identificaba con la derecha poltica. Un
33,7% se etiquetaba como apoltico/a. El 89,3% deca percibirse con un estatus
socioeconmico medio, un 7,1% como bajo y el 3,6% restante deca percibirse con un estatus
socioeconmico alto. Un 83,3% del alumnado encuestado no participaba en ningn
movimiento social o colectivo.
Resultados
A travs de la prueba de Alfa de Cronbach la escala ha obtenido una fiabilidad de .845,
considerndose una fiabilidad moderadamente buena. La consistencia interna del instrumento
se desarroll a travs de la comprobacin de los coeficientes de correlacin de Pearson entre
tem-dimensin. Estas correlaciones fueron estadsticamente significativas en su prctica
totalidad, mostrando as una correcta adecuacin de los tems a su dimensin terica
correspondiente. Se plantea cara la versin definitiva del cuestionario eliminar los 6 tems que
no correlacionaron significativamente con su supuesta dimensin. La validez de contenido
tambin ser medida a travs de la prueba de juicio de expertos (actualmente en desarrollo).
Calculando la media total de las puntuaciones obtenemos una media de 4,75 puntos (sobre 6),
indicando una tendencia a unas actitudes favorables hacia el movimiento feminista.
978-84-695-8363-0
132
Discusin
En primer lugar podemos concluir que despus de la elaboracin del cuestionario los
anlisis estadsticos realizados nos permiten presentar un instrumento apto para medir las
actitudes que la juventud universitaria tiene hacia el feminismo. En general, de los resultados
de este primer acercamiento en la juventud universitaria catalana destacamos que las
puntuaciones generales obtenidas han sido favorables a la conceptualizacin que la
juventud universitaria tiene del movimiento feminista. Estos resultados coinciden con
investigaciones internacionales. Ya desde 1985 Berryman-Fink & Verderber encontraron que,
en general, la juventud universitaria responda tener un buen concepto del movimiento
feminista y de sus integrantes. Recientemente, Yoder et al. (2011) obtuvieron que casi la
mitad de su muestra se mostraba a favor de la ideologa feminista. No obstante, todo y
mostrar unas puntuaciones bastante positivas en referencia al imaginario sobre el feminismo,
este acuerdo no se traduce con la aceptacin de la etiqueta feminista. Centrando el foco en la
dimensin de autoidentificacin feminista medida con una escala independiente a la escala
de actitudes (adaptada de Myakovsky & Witting, 1997), - vemos como el 70% de la muestra
se sita en trminos de aceptacin y apoyo al proyecto feminista, pero rechazando la etiqueta.
Estos resultados son acordes a los resultados de la investigacin internacional. Por ejemplo, la
978-84-695-8363-0
133
primera aplicacin de una escala similar fue con la investigacin llevada a cabo por Morgan
(1996) en la que obtuvo que el 78% de su muestra aceptaba algunos objetivos feministas, pero
no se identificaba como tal. A partir de entonces fueron numerosas las investigaciones al
respecto, obteniendo resultados parecidos. En su mayora alrededor del 70% de la muestra
deca situarse a favor de los objetivos feministas, pero no autoidentificarse como feminista
(Burn et al., 2000; Liss et al., 2001; Liss et al., 2004; Ramsey, 2007). Para interpretar estos
resultados podemos apoyarnos en la teora blandida por Renzetti (1987) segn la cual apoyar
el movimiento feminista no es sinnimo de identificacin feminista. Adems, encontramos
tambin interesante la reflexin de la autora, en la que se subraya la cautela con la que
debemos interpretar estas altas puntuaciones, dado que la muestra proviene de estudios
universitarios de la rama de ciencias sociales y humanidades. Segn Claire Renzetti, este tipo
de alumnado suele estar ms sensibilizado con las problemticas sociales, incluidas las
desigualdades de gnero, hecho que puede llevar a puntuar ms alto en la escala de actitudes y
en autoidentificacin feminista. Por ello se pretende ampliar la muestra de este estudio con
alumnado de otras ramas universitarias. Estos resultados nos deben llevar a reflexionar sobre
la gran dificultad manifiesta de la juventud para autodesignarse feminista, an apoyando la
ideologa y la agenda feminista.
Referencias
Aronson, P. (2003). Feminists or "Postfeminists"? Young women's attitudes toward feminism
and gender relations. Gender & Society, 17(6), 903-922.
Berryman-Fink, C.; Verderber, K.S. (1985). Attributions of the term feminist: A factor
analytic developement of a measuring instrument. Psychology of Women Quarterly,
9(1), 51-64.
Breen, A.; Karpinski, A. (2008). What's in a name? Two approaches to evaluating the label
feminist. Sex Roles, 58, 299-310.
Budgeon, S. (2001). Emergent Feminist(?) Identities. Young Women and the Practice of
Micropolitics. The European Journal of Womens Studies, 8(1), 7-28.
Burn, S. M.; Aboud, R.; Moyles, C. (2000). The relastionship between gender social identity
and support for feminism. Sex Roles, 42(11/12), 1081-1089.
Cacace, M. (2006). Mujeres jvenes y feminismo: Valores, cultura y comportamientos frente
a frente. Madrid: Narcea.
Callaghan, M.; Cranmer, C.; Rowan, M.; Siann, G.; Wilson, F. (1999). Feminism in Scotland:
self-identification and stereotypes. Gender and Education, 11(2), 161-177.
Carballar, O. (02/11/2009). Por qu el feminismo asust a los jvenes? Pblico, 02/11/2009.
Disponible en: http://www.publico.es/265957/por-que-el-feminismo-asusta-a-losjovenes
Cowan, G.; Mestlin, M.; Masek, J. (1992) Predictors of feminist self-labeling. Sex Roles, 27
(7/8), 321-330.
978-84-695-8363-0
134
978-84-695-8363-0
135
978-84-695-8363-0
136
Resumen
Las sociedades contemporneas todava son androcntricas. La igualdad de oportunidades
entre hombres y mujeres ha avanzado, en los ltimos aos, pero an queda mucho por hacer.
La Universidad es el contexto a partir del cual se puede transformar la sociedad y desde
donde se pueden gestionar sociedades ms democrticas. Esta investigacin tiene como
objetivo realizar una aproximacin al diagnstico estratgico de la igualdad de
oportunidades en la Educacin Superior, en Hispanoamrica. Los datos han sido recopilados
en seis universidades hispanoamericanas: Universidad Iberoamericana (Paraguay),
Universidad Nacional de San Agustn (Per), Universidad del Valle (Colombia), Universidad
de Santo Toms (Colombia), Universidad Mayor de San Simn (Bolivia) y Universidad
Mayor de San Andrs (Bolivia). En base a las categoras que surgieron en cada universidad,
a partir de una encuesta aplicada a profesoras y profesores que ocupan cargos acadmicos y
administrativos, hemos identificado las debilidades, fortalezas, oportunidades y amenazas. El
anlisis de los resultados nos ha permitido concluir que es necesario disear e implementar
unidades de igualdad en las universidades participantes en nuestro estudio.
Descriptores: igualdad de oportunidades, diagnstico, fortalezas, debilidades.
Abstract
Contemporary societies are still androcentric. Equal opportunities between men and women
has advanced in recent years, but much remains to be done. The University is the context
from which society is transformed and from where more democratic societies can be
managed. This research aims to make a strategic diagnostic approach of equal opportunities
in higher education in Latin America. Data have been collected in six Latin American
universities: Universidad Iberoamericana (Paraguay), National University of San Agustin
(Peru), Universidad del Valle (Colombia), University of Santo Tomas (Colombia),
Universidad Mayor de San Simon (Bolivia) and University Mayor de San Andrs (Bolivia).
Based on the categories that emerged in each university, from a survey of teachers and
faculty academic and administrative positions, we have identified the strengths, weaknesses,
opportunities and threats. The analysis of the results allowed us to conclude that it is
necessary to design and implement equality units in the universities participating in our study.
Keywords: equal oportunitys, diagnosis, strengths, weaknesses.
978-84-695-8363-0
137
Introduccin
Desde sus orgenes la Filosofa defini a la mujer enfatizando en la polaridad entre los
gneros. Esta dicotomizacin encuentra su fundamentacin metafsica en el dualismo
ontolgico de Platn en virtud del cual la realidad se presenta dividida en dos mundos
contrapuestos: el mundo superior, invisible, eterno e inmutable de las ideas y el universo
fsico, visible y material. Esto genera un dualismo antropolgico que defiende la idea de que
es el alma, la mente o la razn la que permite trascender lo meramente corporal y alcanzar la
dignidad humana. Esta categora humana, segn Platn, la encarnaran solo los varones, ya
que las mujeres tendran una capacidad racional disminuida (Mayobre, 2007). Por su parte, en
opinin de Aristteles, las diferencias naturales que reflejan el carcter deban plasmarse en la
organizacin social. As, en tanto que sujetos naturalmente ms frgiles e imperfectos, las
mujeres deban ocupar un lugar subordinado en la organizacin de la ciudadana y del Estado.
Estas creencias prevalecieron en Occidente durante los siglos posteriores. Rousseau
identificaba la feminidad con la pasividad y la masculinidad con la actividad. En su opinin,
la pasividad femenina constitua el inhibidor natural de la tendencia masculina a la actividad
sexual; es decir, el autocontrol en las mujeres era un medio esencial para evitar el caos
asociado al desenfreno de los instintos, de la irracionalidad y de las pasiones humanas.
La modernidad acenta el dualismo platnico, ya que con Descartes y el cartesianismo
pasin y racionalidad se consideran dos extremos irreconciliables. El dualismo mente/cuerpo,
espritu/naturaleza, razn/pasin o sentimiento se agudiza. Kant insiste en un modelo de
sujeto guiado exclusivamente por la razn. La moral kantiana forja el ideal de un sujeto moral
autosuficiente, un sujeto autnomo, que se aleja de los sentimientos y de las emociones. Este
ideal de sujeto autocontrolado, desvinculado del cuerpo y de las relaciones personales excluye
una vez ms a las mujeres, las que, segn l, difcilmente se acoplan a ese modelo. Rousseau
define a la mujer en relacin al varn. Sofa est destinada a ser la esposa de Emilio, su
educacin ha de estar orientada a satisfacer las necesidades fsicas, afectivas y sexuales del
varn, por lo que el varn sigue siendo el prototipo perfecto.
Este discurso discriminador difundido por importantes filsofos, pedagogos e
idelogos modernos de la poca. Contrarias a estas posturas, se propagaban otras filosofas
que defendan una concepcin igualitaria de los sexos. Destacan Poullain de la Barre con su
obra de L'galit des deux sexes (1673), Condorcet (1743-1794) en su Ensayo sobre la
admisin de las mujeres al derecho de ciudadana (1790), Olympe de Gouges (1748-1793)
con su Declaracin de los Derechos de la Mujer y la Ciudadana (1791) o Mary
Wollstonecraft (1757-1797) con Vindicacin de los Derechos de la Mujer. Todos insisten en
que es el prejuicio o la costumbre lo que induce a pensar que los varones son superiores a las
mujeres, pero que si se atiende a los dictados de la razn se ha de concluir que todos los seres
humanos son iguales, pues "el cerebro no tiene sexo" (Mayobre, 2007).
En, 1640, Thomas Hobbes, en Elements of Law y De Cive (1640), pona en tela de
juicio la autoridad patriarcal y hablaba, por primera vez, del carcter convencional de la
dominacin del varn sobre la mujer. Es conocida la afirmacin de Hobbes respecto a que
cuando los seres humanos se encuentran enfrentados, se convierten en lobos de s mismos.
Cuando Hobbes habla de la naturaleza humana, se refiere a la especie humana y por tanto no
establece ninguna exclusin por cuestiones de gnero.
978-84-695-8363-0
138
la
igualdad
de
oportunidades
en
las
universidades
978-84-695-8363-0
139
978-84-695-8363-0
140
Tabla 1
Factores internos
FACTORES INTERNOS
FORTALEZAS
DEBILIDADES
978-84-695-8363-0
141
978-84-695-8363-0
142
Tabla 2
Factores externos
FACTORES EXTERNOS
OPORTUNIDADES
AMENAZAS
Con relacin a este factor externo a las universidades, surgieron las siguientes
variables sealadas por todas las universidades participantes: situacin econmica del pas y
la regin; coyuntura poltica nacional y regional; escasa concienciacin o desconocimiento en
temas de gnero en la sociedad; tendencias histricas culturales que limitan las posibilidades
de las mujeres en el estudio y en el trabajo; pervivencia en la exigencia a las mujeres roles
tradicionales de las mujeres en la sociedad; e insuficiente presencia de mujeres en cargos
polticos y de decisin, en mbitos locales y nacionales.
Finalmente, cinco universidades, excepto la Universidad Iberoamericana (Paraguay),
manifestaron como amenaza la politizacin de las prcticas y la gestin acadmica
universitaria.
En el anlisis de los resultados aparecen tres variables vinculadas con las
oportunidades que tienen las universidades para coadyuvar en la igualdad de oportunidades: la
participacin en el Proyecto de Igualdad de Oportunidades; la posibilidad institucional de
realizar convenios nacionales e internacionales y de constituir Redes de igualdad de
oportunidades; y la disposicin favorable del entorno social.
Por su parte, dos universidades sealaron, como oportunidad, la existencia del
Ministerio de la mujer e inclusin social (Universidad San Agustn, Universidad
Iberoamericana), y otras dos, el Viceministerio de igualdad de oportunidades (Universidad
Mayor de San Simn, Universidad Mayor de San Andrs).
Igualmente, una universidad seal, como oportunidad, la realizacin del Segundo
Congreso Universitario (Universidad Mayor de San Simn) y otra (Universidad
Iberoamericana), la realizacin del Primer encuentro de investigador@s en gnero y primera
infancia.
978-84-695-8363-0
143
Discusin
Tradicionalmente se consideraba que el sexo era el factor determinante de las
diferencias observadas entre varones y mujeres, y que era el causante de las diferencias
sociales existentes entre las personas de sexo femenino y de sexo masculino. Sin embargo,
hoy se reconoce que en la configuracin de la identidad masculina o femenina intervienen no
slo factores genticos sino estrategias de poder, elementos simblicos, psicolgicos, sociales,
culturales etc., es decir, elementos, que no son genticos, pero que son factores determinantes
en la configuracin de la identidad personal.
En base al anlisis DAFO, se ha determinado la importancia de los factores positivos y
negativos, comunes a todas las universidades que intervinieron en este estudio. Esto nos ha
permitido resumir y evaluar la influencia econmica, social, cultural, demogrfica, ambiental,
poltica, gubernamental, jurdica del contexto en el que se desenvuelven las universidades
hispanoamericanas, con relacin a la igualdad de oportunidades. Hay que destacar que la que
las fortalezas de estas universidades, de cara a la igualdad de oportunidades, an son dbiles.
Los resultados nos indican que las universidades tienen que evaluar sus actuaciones con
relacin a la igualdad de oportunidades. Es importante determinar las causas por las no se ha
logrado la igualdad de gnero y cul es el mejor camino para cambiar esta situacin. En
sntesis, las estrategias que se planteen, de cara a futuro, deben ser pertinentes e intensivas.
Las universidades tienen un avance lento en el camino a la igualdad de oportunidades.
Probablemente esto se deba a que las actuaciones son escasas y a que estas se hayan realizado
de manera aislada.
Conclusin
A partir del anlisis DAFO, se ha determinado que los ejes ms importantes que hay
que trabajar, en la igualdad de oportunidades son: representacin, docencia, investigacin,
acceso y promocin del profesorado, sensibilizacin y difusin.
Los pases y su normativa son receptivos a la igualdad de oportunidades. El problema
radica en que, en la prctica, en la vida cotidiana, estas no se aplican. Asimismo, de acuerdo
con el anlisis realizado, no existe ninguna universidad que tenga una unidad de igualdad. No
obstante, en muchas de ellas, se han realizado estudios aislados desde la perspectiva de
gnero, a travs de masters, cursos o unas pocas asignaturas, que se imparten en algunas
facultades o programas. Las universidades hispanoamericanas son conscientes de la necesidad
de contar con una unidad de igualdad. Por tanto, es una obligacin de la universidad, en
cumplimiento de los preceptos establecidos en la legislacin vigente, favorecer la aceleracin
de ese proceso de equiparacin entre mujeres y hombres (Altbach, 2003; Bonetta, 2010). Para
ello es necesario realizar esfuerzos en todos los niveles, aprovechando la voluntad de generar
cambios, de la mayora de las mujeres.
Es importante que las Universidades constituyan redes colaborativas, de trabajo y de
investigacin, en la perspectiva de la igualdad de oportunidades. Esto permitir un desarrollo
acompaado en el diseo de polticas. Las redes sern una fuente generadora de ideas
permanente, favoreciendo la puesta en comn de buenas prcticas. Asimismo, permitir un
trabajo conjunto, entendiendo que la bsqueda de igualdad de oportunidades es una
responsabilidad compartida; y, sobre todo, posibilitar abordar, de manera conjunta la
978-84-695-8363-0
144
problemtica general que constituye, actualmente, una barrera de acceso para el profesorado y
para el alumnado.
Referencias
Altbach, P. G. (2003). Globalization and the University: Myths and realities in an unequal
world, Current Issues in Catholic Higher Education (23), 525.
Banco Mundial (2012). Informe sobre el desarrollo mundial. Panorama General. Igualdad de
Oportunidades y Desarrollo.
Bonetta, L. (2010). Reaching Gender Equity in Science: The Importance of Role Models and
Mentors. Science, 889-895.
Carrell, S. E., Page, M. E., & West, J. E. (2009). Sex and Science: How professor Gender
Perpetuates the Gender Gap. NBER Working Paper Series, w14959. Recuperado de
http://www.econ.ucdavis,edu/faculty/scarrell/gender.pdf
European Commission (2005). Women in Science: Excellence and Innovation. Gerder
Equality in Science. Brussels: Director General for Research. Recuperado de http//
ec.europa.eu/research/science-society/pdf/sec_report
European Commission (2009). Consultation on the Future EU 2020 Strategy. Brussels:
Comission Working Document. Recuperado de http//ec.europa.eu/eu 2020/pdf/eu
2020
Mayobre, P. (2007). La formacin de la identidad de gnero una mirada desde la filosofa
Revista Venezolana de Estudios de la Mujer, 12, 28.
Pay, (2006). La igualdad de oportunidades como criterio de lo justo. A Parte Rei. Revista de
Filosofa, 10, 1-17.
978-84-695-8363-0
145
Resumen
La dimensin social de la Educacin Superior constituye uno de los elementos fundamentales
de las polticas universitarias dirigidas a favorecer la equidad en el acceso y la permanencia
de los estudiantes. Las polticas de becas y ayudas al estudio contribuyen a la equidad ya que
garantizan una renta a las familias con menor nivel de recursos. En Espaa la implantacin
de las becas salario pretenden garantizar el acceso a los estudios universitarios a aquellos
grupos sociales ms desfavorecidos econmicamente. La aportacin presenta los resultados
de un estudio dirigido a conocer el perfil de los universitarios becados con la beca salario de
la promocin 2010-11 de la Universidad de Barcelona y el impacto sobre su rendimiento en
el primer ao de universidad. Estos resultados, que son parte de un proyecto de investigacin
ms amplio, permiten identificar diferencias en funcin de las reas de estudio, del sexo y del
contexto socio-familiar.
Descriptores: Equidad, Poltica de becas, Beca salario, Rendimiento.
Abstract
The social dimension of Higher Education is one of the fundamental elements of university
policies aimed at greater equity in access and retention of students. Policies and financial aid
scholarships contribute to equity and guaranteeing an income for families with lower levels of
resources. In Spain the implementation of salary grants intended to ensure access to
university studies to those economically disadvantaged social groups. The research presents
the results of a study to determine the profile of the college scholarship with scholarship
2010-11 salary promotion of the University of Barcelona and the impact on their
performance in the first year of college. These results are part of a larger research project, to
identify differences in terms of the areas of study, sex and socio-familial context.
Keywords: Equity, Grants policy, Grant salary, Performance.
Introduccin
La dimensin social de la Educacin Superior constituye uno de los elementos
fundamentales y clave de las polticas universitarias a nivel internacional en estos inicios del
siglo XXI (Eurydice, 2011). Como seala Ario (2009, 2011), slo incrementando las
oportunidades para un mayor nmero de personas en el acceso a la universidad se ofrecern
tambin oportunidades al talento, en una sociedad basada en la produccin de conocimiento.
Y, a la vez, representa tambin el reto de mayor envergadura para los sistemas, ya que deben
978-84-695-8363-0
146
articular los medios y las acciones para garantizar la equidad participativa, es decir, que el
colectivo de estudiantes matriculados que participa y completa los estudios universitarios,
refleja la diversidad socioeconmica y cultural de nuestras sociedades.
La poltica de becas y ayudas al estudio se considera una de las medidas para
favorecer la equidad y la igualdad de oportunidades para el acceso al conjunto de la
poblacin. En Espaa, dentro del marco de la Estrategia 2015, se introduce a partir del curso
2009-10 un nuevo modelo de becas y ayudas (Real Decreto 922/2009, de 29 de mayo) que
incluye la implantacin de la modalidad de la beca salario. Esta modalidad persigue
garantizar el acceso a los estudios universitarios a aquellos grupos sociales ms
desfavorecidos econmicamente y la dedicacin al mismo a tiempo completo.
La finalidad del nuevo modelo de becas es contribuir a una distribucin equitativa no
slo de las oportunidades de acceso, sino de trayectorias (persistencia) y resultados
(graduacin). La investigacin en el mbito de la transicin y el abandono universitario ha
apuntado la importancia de estas medidas, al sealar las condiciones econmicas como uno de
los factores clave en la explicacin de la persistencia y de la graduacin universitaria. De
hecho, el riesgo de abandono es superior entre el alumnado procedente de contextos
socialmente desfavorecidos (Bowen, Chingos y McPherson, 2009; Figuera y Torrado, 2013;
Gairn, Figuera y Triad, 2010; Rowan-Kenyon, Bell y Perna, 2008). Especialmente
significativos son los trabajos de Cabrera, Burkum, LaNasa y Bibo (en prensa), quienes
concluyen que los determinantes de la persistencia y graduacin varan en funcin de los
niveles socioeconmicos de los estudiantes. El factor econmico tiene su peso en cualquier
decisin sobre la continuidad universitaria, y su influencia es mucho ms significativa en el
inicio de la actividad como estudiante universitario (Tinto, 2010). Por ello, en el marco
internacional, la poltica de becas se ha tratado como un factor institucional clave en la
prevencin del abandono, en la persistencia y retencin de los estudiantes.
Esta comunicacin forma parte de una investigacin ms amplia (tesis doctoral)
dirigida a estudiar la efectividad de la poltica de becas en los procesos de transicin a la
universidad, ms especficamente analizando en qu medida el nuevo modelo de becas
garantiza un acceso ms equitativo, la dedicacin a los estudios; e, indirectamente, el
rendimiento acadmico, al liberarles de la necesidad de simultanear sus estudios con alguna
dedicacin laboral. La comunicacin presenta los datos relativos a la incidencia de la beca
salario en el contexto de la Universidad de Barcelona y su impacto por reas de
conocimiento, el anlisis del perfil socioeconmico de los estudiantes y el rendimiento en el
primer ao.
Metodologa
La investigacin realizada es un estudio ex post facto de carcter descriptivocomparativo a partir del seguimiento longitudinal de los estudiantes que accedieron a la
Universidad de Barcelona con beca salario el curso 2010-11. Se analizaron los datos
procedentes de la base institucional que integra la informacin de los estudiantes de nuevo
ingreso en los grados de la Universidad de Barcelona. Se ha tomado como referencia para el
estudio la cohorte de acceso a la universidad en el curso 2010-11, curso acadmico en el que
podemos considerar implantado el nuevo programa. La informacin disponible se refiere a un
total de 10.394 estudiantes, de los cuales 642 son universitarios becados con la beca salario,
pertenecientes a un total de 68 grados, de las reas de Artes y Humanidades, Ciencias,
Ingeniera y Arquitectura, Ciencias de la Salud y Ciencias Sociales y Jurdicas.
978-84-695-8363-0
147
Resultados
En el curso 2010-11 se concedieron 642 becas salario a estudiantes de grado de la
Universidad de Barcelona, cifra que representa el 6,2% del total de estudiantes (10.394) de
nuevo ingreso. Este es un porcentaje relevante teniendo en cuenta que las condiciones
econmicas que deben cumplir los estudiantes para solicitar esta beca son realmente
exigentes. La distribucin de estudiantes con beca salario por reas de estudio pone de
manifiesto una mayor proporcin de estudiantes matriculados en estudios del rea de
Ciencias Sociales (51%).
Para analizar la incidencia de la beca salario en el acceso se han comparado los
indicadores sociodemogrficos y de background acadmico en relacin a la poblacin
general. Del conjunto de variables, dos presentan diferencia significativa: el sexo y los
indicadores socioeconmicos de los padres. El volumen de mujeres con beca salario es
sensiblemente superior, en general, al de hombres (445 mujeres frente a 197 hombres). Si
bien la Universidad de Barcelona, y los estudios sociales en particular, estn feminizados, los
datos ponen de manifiesto que las mujeres obtienen en proporcin ms becas salario (un 7%
de las mujeres frente a un 4,9% de los hombres).
Como era de esperar las variables de background sociofamiliar (nivel ocupacional y
estudios de los padres y madres) de los universitarios becados muestran diferencias en
relacin al perfil general. El nivel de estudios de los progenitores del alumnado que ha
obtenido beca salario es inferior al resto de estudiantes (Figura 1). Relacin que se mantiene
en el anlisis del segundo indicador del background familiar considerado nivel ocupacional.
En el caso de aquellos estudiantes con beca salario, cuyos padres tienen niveles educativos
y/o ocupacionales superiores, podemos inferir en el efecto sobre las familias de la crisis
econmica que ha afectado en nuestro pas a todos los niveles ocupacionales.
978-84-695-8363-0
148
a sus compaeros sin beca salario. Resultados esperables ya que la obtencin de la beca
salario no tiene requisitos acadmicos en el primer ao universitario.
Para analizar en qu medida la concesin de una beca salario puede estar ayudando a
mejorar el rendimiento acadmico de los estudiantes becados, se han considerado las
siguientes medidas: el nmero de asignaturas presentadas, la nota media de las asignaturas
presentadas, la tasa de presentacin (asignaturas presentadas/asignaturas matriculadas), la tasa
de xito (asignaturas aprobadas/asignaturas presentadas) y la tasa de rendimiento (asignaturas
aprobadas/asignaturas matriculadas). Los resultados de la Tabla 1 ponen de manifiesto que
slo existen diferencias claras en cuanto al nmero de asignaturas matriculadas y la tasa de
xito. Concretamente, los estudiantes con beca salario se matriculan de ms asignaturas
(debido a las condiciones impuestas por la concesin de la beca).
Tabla 1
Diferencias entre estudiantes con beca y sin beca
Asignaturas Matriculadas > 5
Asignaturas Presentadas > 5
Asignaturas Aprobadas > 5
Tasa de Presentacin> 0,75
Tasa de xito> 0,75
Tasa de Rendimiento> 0,75
No Becados
Becados
p-valor*
85,6%
75,4%
64,5%
85,9%
74,7%
69,2%
93,9%
85,4%
72,4%
87,9%
70,1%
66,5%
,000
,096
,891
,177
,008
,118
Por otra parte, el anlisis de las asignaturas presentadas por los estudiantes que gozan
de una beca salario, en relacin al resto de estudiantes, muestra un patrn diferente cuando
analizamos los resultados en funcin de la rama a la que pertenece cada titulacin (Tabla 2).
As, por un lado tenemos que en las ramas de Ciencias Sociales y Jurdicas, Ingeniera y
Arquitectura y Artes y Humanidades los estudiantes con beca salario se presentan a ms
asignaturas que los que no tienen beca. En cambio, en las ramas de Ciencias de la Salud
sucede justo lo contrario, que los estudiantes con beca salario se presentan a menos
asignaturas. Mientras, en la rama de Ciencias, no se observan diferencias entre unos y otros.
Aunque hemos de considerar que los requisitos de acceso son diferentes, las diferencias
observadas resultan, como mnimo, interesantes y aconsejan un estudio en profundidad que
tome en consideracin las caractersticas docentes y organizativas de cada mbito disciplinar.
En referencia a la nota media de las asignaturas presentadas, el anlisis por mbitos
disciplinares pone de manifiesto algunas diferencias. En las titulaciones de Ciencias y en las
de Ciencias Sociales y Jurdicas, los resultados siguen la misma tendencia del conjunto, es
decir, el rendimiento entre los estudiantes con beca es inferior (Tabla 2). Coincide con
aquellas carreras en las que los estudiantes con beca se matriculaban en mayor nmero de
asignaturas y, por lo tanto, la presin acadmica sera mayor. En el resto de ramas de
conocimiento no existen diferencias entre los dos grupos de estudiantes. Estos resultados
parecen confirmar la hiptesis de que la presin generada para superar un mnimo de
asignaturas puede tener un efecto negativo en las notas medias, sobre todo, en ciertas ramas.
978-84-695-8363-0
149
Tabla 2
Contraste de medias del nmero de asignaturas presentadas y de la nota media por reas de estudio
Asignaturas Presentadas
Artes y Humanidades
Ciencias
Ingeniera y Arquitectura
Ciencias de la Salud
Ciencias Sociales y
Jurdicas
No
becados
6,8
8,1
7,4
9,5
8,5
Nota Media
Becados
p-valor*
7,6
8,0
7,5
9,3
,001
,771
,970
,254
No
Becados
6,2
5,6
4,5
6,6
8,9
,002
6,0
Becados
p-valor*
6,0
5,1
4,6
6,5
,080
,017
,912
,604
5,8
,017
Conclusiones
La dimensin social es uno de los objetivos de la Estrategia 2015. En este nuevo
marco, las becas y ayudas han de facilitar la igualdad de oportunidades, promover el estudio y
el rendimiento acadmico y la movilidad nacional e internacional. Pero la importancia de los
programas de becas no se limita a su obvia contribucin a la equidad, sino que tambin se
espera que contribuyan a mejorar la eficiencia educativa, bajo el supuesto que aprovechan las
potencialidades de muchos jvenes pertenecientes a familias de bajas rentas, convirtindose
en un factor de persistencia para la obtencin de un ttulo.
Los resultados obtenidos permiten visualizar algunos datos en relacin a las primeras
fases de aplicacin del nuevo modelo de financiacin a travs de la incorporacin de la beca
salario. El anlisis nos lleva a observar que no hay diferencias significativas entre ambos
grupos de estudiantes, ms all de las variables socioeconmicas. Por tanto, la beca salario no
deja de ser un mecanismo de entrada para aquellos estudiantes que, sin la beca, hubieran
tenido mayores dificultades econmicas para acceder a la universidad. El anlisis de la base
de datos en esta primera etapa de la investigacin ha permitido poner de manifiesto que los
estudiantes con beca se presentan, en promedio, a un mayor nmero de asignaturas con la
finalidad de cubrir los requisitos acadmicos de renovacin de becas, pero los resultados
acadmicos finales (nota media) se ven, en varias reas de estudio, influidos negativamente.
Una posible explicacin es la mayor presin acadmica de este colectivo en una fase de por s
complicada: la transicin a la universidad.
Entre los factores de presin estaran las exigencias en cuanto a volumen de matrcula.
Pero tambin hay que considerar que los efectos de las variables del contexto familiar pueden
influir indirectamente sobre los resultados acadmicos de los estudiantes, a travs de factores
como el contexto cultural-familiar, la posibilidad de acceder a cursos complementarios a la
universidad, la red social, etc. (en lnea con las tesis de autores como Cabrera, Burkum,
LaNasa y Bibo, en prensa). Ms all de las ayudas econmicas, la universidad debe valorar la
aplicacin de programas institucionales que incluyan el soporte cultural de estos grupos para
asegurar la equidad perseguida por el sistema. Los datos obtenidos ponen, tambin, de
manifiesto la existencia de mltiples realidades vinculadas a las caractersticas docentes y
organizativas de cada mbito disciplinar, que aconsejan un estudio en profundidad de los
procesos de transicin a la universidad de los estudiantes para analizar despus la incidencia
real de la beca salario.
978-84-695-8363-0
150
Referencias
Ario, A. (2009). La dimensin social y la innovacin en el Espacio Europeo de Educacin
Superior. Revista dInnovaci Educativa, 2, 2-9.
Ario, A. y Llopis, R. (Dirs.) (2011). Universidad sin clases? Condiciones de vida de los
estudiantes universitarios en Espaa (Eurostudent IV). Madrid: Ministerio de
Educacin.
Bowen, W. G., Chingos, M. M. y McPherson, M. S. (2009). Crossing the finish line:
Completing College at Americas public universities. Princeton, NJ: Princeton
University Press.
Cabrera, A., Burkum, K.R., LaNasa, S.M. y Bibo, E.W. (en prensa). Pathways to a four-year
degree: Determinants of transfer and degree completion among socioeconomically
disadvantaged students. En A. Seidman (Ed.), College student retention. Westport,
CT: Praeger Publishers.
Eurydice (2011). La modernizacin de la educacin superior en Europa 2011: financiacin y
dimensin social. Bruselas: Eurydice.
Figuera, P. yTorrado, M. (2013). El contexto acadmico como factor diferenciador en la
transicin a la universidad. Revista Contrapontos, 13(1), 33-41.
John, E. P., Cabrera, A. F., Nora, A. y Asker, E. H. (2000). Economic influences on
persistence reconsidered. En J.M. Braxton (Ed.), Reworking the Student Departure
Puzzle (pp. 29-47). Nashville (TN): VanderbiltUniversity.
Ministerio de Educacin (2009). Real Decreto 922/2009, de 29 de mayo, por el que se
establecen los umbrales de renta y patrimonio familiar y las cuantas de las becas y
ayudas al estudio del Ministerio de Educacin para el curso 2009-2010. Boletn Oficial
del Estado, 30/05/2009.
Ministerio de Educacin (2011). Estrategia 2015. Contribucin de las universidades al
progreso socioeconmico espaol. Madrid: MEC.
Rowan-Kenyon, H.T., Bell, A.D. y Perna, L. W. (2008). Contextual influences on parental
involvement in college going: Variations by socioeconomic class. The Journal of
Higher Education, 79(5), 564-586.
Tinto, V. (2010). From theory to action: Exploring the institutional conditions for student
retention. Higher Education: Handbook of Theory and Research, XXV, 5190.
978-84-695-8363-0
151
Resumen
El propsito de este estudio fue analizar las creencias que tienen los estudiantes de
Psicopedagoga de la Universidad de Alicante acerca de la diversidad. Para ello, se cont
con la participacin de 74 estudiantes a los que se les administraron las Escalas sobre
Creencias Personales y Profesionales acerca de la Diversidad desarrolladas por Pohan y
Aguilar (1999). Los resultados indican que los estudiantes de Psicopedagoga muestran unas
creencias altamente positivas hacia la diversidad, tanto en el contexto personal como en el
profesional, en todas sus dimensiones (diversidad cultural, discapacidad, prcticas
educativas, gnero, lengua, religin, orientacin sexual y estatus socioeconmico). Asimismo,
se observa una relacin significativa entre las perspectivas personal y profesional, con una
valoracin ms alta en el contexto personal que en el profesional. No se hallaron diferencias
en las creencias de los estudiantes en funcin del nmero de cursos sobre multiculturalidad y
diversidad recibidos.
Descriptores: Diversidad, Educacin multicultural, Creencias.
Abstract
The purpose of this study was to examine students personal and professional beliefs about
diversity. The Personal and Professional Beliefs About Diversity Scales, developed by Pohan
and Aguilar (1999), were used to collect data from a sample of 74 students enrolled in a
postgraduate course on Education Psychology at the University of Alicante, Spain. Results
show that students have highly positive beliefs about diversity, both in the personal and the
professional context, in all its dimensions (cultural diversity, disabilities, educational
practices, gender, language, religion, sexual orientation, and socioeconomical status).
Addiontally, a significant relationship between personal and professional beliefs was found,
with higher levels of diversity sensitivity in the personal content than in the professional
context. Results did not show significant differences in students beliefs regarding the number
of courses on multicultural education and diversity received.
Keywords: Diversity, Multicultural education, Beliefs.
Introduccin
En un contexto de diversidad cultural y social como el que actualmente vivimos en
nuestra sociedad, resulta necesario indagar sobre los constructos mentales y los procesos que
978-84-695-8363-0
152
subyacen a las prcticas educativas de los profesores y su influencia sobre las expectativas y
el rendimiento acadmico de los alumnos. Cada vez es ms frecuente que los profesores se
encuentren en las aulas con alumnos de distintas procedencias culturales, religiosas,
lingsticas y sociales, lo que supone un reto para el profesor, teniendo que hacer frente a las
diversas necesidades educativas de sus alumnos. Tras la respuesta educativa que cada profesor
ofrece a dichas necesidades, se encuentran ejerciendo una importante influencia las creencias,
percepciones, actitudes y expectativas que sobre la educacin y la diversidad han ido
desarrollando los docentes a lo largo del tiempo.
De acuerdo con Bandura (1982), las creencias median el conocimiento y la accin.
Segn esta teora, las creencias de los docentes sientan las bases de su conocimiento y afectan
a sus prcticas educativas. En este sentido, las creencias que los profesores tienen acerca de la
diversidad es probable que influyan en sus expectativas sobre los estudiantes y el rendimiento
acadmico de los mismos (Giambo y Szecsi, 2007). Si a esto aadimos que las creencias
previas estn bien establecidas en el momento en que el estudiante entra en la universidad y
que estas creencias se forman a travs de las experiencias personales, la escolarizacin e
instruccin y el conocimiento formal (Richardson, 1996), resulta necesario examinar dichas
creencias con el objeto de desarrollar programas de formacin y experiencias que favorezcan
la reconstruccin de creencias errneas y tengan un impacto positivo sobre los profesores y
los estudiantes (Gmez, 1993). En muchos casos, las creencias errneas estn tan
interiorizadas en las personas que no son conscientes de ellas. Pero cuando los profesores son
capaces de reconocerlas y entenderlas, se pueden lograr cambios positivos (Bryan, 2003). As,
cuanto ms conscientes sean los profesores de su sistema de creencias, ms fcilmente podrn
influir sobre sus propias intenciones y acciones (Su-Chuan, 2009).
Garmon (2004) examin la relacin entre determinados factores y el desarrollo de una
mayor conciencia y sensibilidad multicultural en profesores en formacin. Entre los seis
factores que parecen tener un papel relevante en su desarrollo, se encontraran factores
disposicionales (apertura a la diversidad, autoconciencia y autorreflexin, y compromiso con
la justicia social) y factores experienciales, como las experiencias interculturales, las
experiencias con grupos de apoyo y las experiencias educativas. En esta lnea, estudios
centrados en examinar la relacin entre la realizacin de cursos sobre multiculturalidad y el
desarrollo de una mayor conciencia y sensibilidad multicultural en los futuros profesores
parecen indicar que dichos cursos influyen positivamente en el desarrollo de creencias ms
favorables hacia la diversidad (Nayda, 2003; Garmon, 2004; Giambo y Szecsi, 2007), si bien
otros trabajos no han conseguido demostrar esta relacin (Haberman y Post, 1992; Momorie,
2005).
Por otro lado, Pohan y Aguilar (2001) apuntan la necesidad de evaluar las creencias de
los profesores y futuros profesionales de la educacin en base a dos perspectivas, la personal
y la profesional. Las autoras se basan en la idea de que en ciertas situaciones las creencias
personales y las profesionales de una persona sobre un mismo tema pueden entrar en
conflicto. Las creencias personales haran referencia a la esfera o visin del mundo personal
(e.g., relaciones personales, crianza de hijos, el trato con los otros, condiciones de vida y
estereotipos colectivos), mientras que las creencias profesionales estaran relacionadas con el
contexto educativo (e.g., prcticas educativas, recursos, inclusin). No obstante, los hallazgos
de investigaciones previas sobre esta cuestin no han sido concluyentes. Si bien algunos
autores como Taylor (1999), las mismas Pohan y Aguilar (2001) y Cardona y Chiner (2002)
hallaron una relacin significativa entre ambas dimensiones, otros autores afirman que no
978-84-695-8363-0
153
siempre unas creencias y otras estarn altamente relacionadas (Bingham, Haubrich, White y
Zipp, 1990).
Un objetivo fundamental de los programas de formacin del profesorado y de los
profesionales de la educacin ha de ser preparar a los docentes para responder adecuadamente
a las necesidades e intereses de todos los alumnos, independientemente de su origen cultural,
lingstico, religioso o social. Para ello, los futuros docentes debern desarrollar un mayor
entendimiento y sensibilidad hacia la diversidad que afectar positivamente en sus prcticas
educativas.
Por todo lo anterior, en este estudio se pretende (1) conocer las creencias personales y
profesionales de los estudiantes de Psicopedagoga acerca de la diversidad, (2) examinar la
relacin y posibles diferencias entre las creencias personales y las creencias profesionales de
los estudiantes acerca de la diversidad, (3) identificar diferencias entre las creencias
personales y profesionales en cada una de las dimensiones tratadas, y (4) analizar el impacto
de la formacin recibida en cursos sobre multiculturalidad y diversidad sobre las creencias
personales y profesionales de los estudiantes.
Mtodo
Participantes
En el estudio participaron 74 estudiantes matriculados en el primer ao del segundo
ciclo de la titulacin de Psicopedagoga. Del total de participantes, 67 (91%) eran mujeres y 7
(9%) eran varones y sus edades oscilaban entre los 21 y 45 aos, con una edad media de 23,34
(DT = 4,28). Prcticamente la totalidad de los estudiantes no trabajaba (96%) por lo que la
experiencia docente media era inferior a un ao (M = 0,07; DT = 0,30). Todos los estudiantes
que participaron tenan la titulacin previa de Magisterio. Concretamente, 24 (32%) eran
diplomados en Educacin Infantil, 30 (41%) en Educacin Primaria, 8 (11%) en Educacin
Fsica, 7 (10%) en Lengua Extranjera, 4 (5%) en Educacin Musical, y un estudiante (1%)
haba recibo la formacin previa en Educacin Especial.
En relacin con el nmero de cursos sobre multiculturalidad y diversidad, el 41% (n =
30) no haban recibido ningn curso que tratara esta temtica, 20 estudiantes (27%) haban
recibido solamente un curso, 21 (28%) entre dos y tres cursos, y 3 (4%) cuatro cursos o ms.
Igualmente, el 92% (n = 68) afirmaba haber tenido algn tipo de contacto o experiencias con
personas de otras culturas, capacidades, orientacin sexual, etc., a travs de amistades (61%),
viajes (35%), estudios y/o trabajos en el extranjero (30%), trabajo (26%) y actividades de
voluntariado (19%).
Instrumentacin
Los instrumentos utilizados para medir las creencias de los estudiantes acerca de la
diversidad fueron las Escalas sobre Creencias Personales y Profesionales acerca de la
Diversidad de Pohan y Aguilar (1999). Ambas escalas miden las creencias, desde una
perspectiva personal y profesional, que tienen los profesores sobre aspectos como la
diversidad cultural, discapacidad, prcticas educativas, gnero, lengua, religin, orientacin
sexual y estatus socioeconmico. La escala sobre creencias personales aborda dichas
cuestiones a travs de 15 afirmaciones, mientras que la escala sobre creencias profesionales
consta de 25 tems que tratan la diversidad en el contexto educativo. En ambos casos, se
978-84-695-8363-0
154
978-84-695-8363-0
155
2,5
2
1,5
1
0,5
0
DC
OS
ES
PE
Figura 1. Puntuacin total media de las creencias personales y profesionales por dimensin
978-84-695-8363-0
156
Tabla 2
Diferencias entre las creencias personales y profesionales segn la dimensin estudiada
N
Dime nsiones
Diversidad cultural
74
Discapacidad
74
Gnero
74
Lengua
74
Orientacin sexual
74
E. socioeconmico
74
* Significativa al 0,01 (p < 0,01)
** Significativa al 0,05 (p < 0,05)
Personales
M
DT
4,07
0,43
4,33
0,66
3,16
0,40
3,64
0,85
4,56
0,43
4,52
0,62
N
74
74
74
73
74
74
Profesionales
M
DT
3,81
0,31
4,55
0,64
2,81
0,58
4,02
0,44
4,87
0,36
3,56
0,75
t
4,51
-2,23
4,68
-3,73
-6,57
7,98
gl
73
73
72
72
72
73
p
0,000*
0,028**
0,000*
0,000*
0,000*
0,000*
978-84-695-8363-0
157
978-84-695-8363-0
158
Garmon, A. (2004). Changing preservice teachers attitudes/beliefs about diversity: What are
the critical factors? Journal of Teacher Education, 55(3), 201-214.
Giambo, D. y Szecsi, T. (2007). Does diversity education make a difference in teacher
education? Practice and Theory in Systems of Education, 2(3-4), 35-50.
Haberman, M. y Post, L. (1992). Does direct experience change education students
perceptions of low-income minority students? Midwest Educational Researcher, 5(2),
29-31.
Heuharth-Princhett, S., Reiff, J. y Pearson, C. (2001). Through the eyes of preservice
teachers: Implications for multicultural journal from teacher education. Journal of
Research in Childhood Education, 15(2), 256-270.
Momorie, T. M. (2005). A preliminary study of the impact of required multicultural classes
on the personal and professional beliefs of post-secondary education students. Tesis
doctoral no publicada, Universidad de North Florida.
Nayda, C. (2003). Voices of teacher candidates: Positive changes in multicultural attitudes
and knowledge. Journal of Educational Research, 96(3), 182-190.
Pohan, C. A. y Aguilar, T. E. (1999). The personal and professional beliefs about diversity
scales: Users manual and scoring guide. Documento no publicado.
Pohan, C. A. y Aguilar, T. E. (2001). Measuring educators beliefs about diversity in personal
and professional contexts. American Educational Research Journal, 38(1), 159-182.
Richardson, V. (1996). The role of attitude and beliefs in learning to teach. En J. Sikula, T.
Buttery y E. Guyton (Eds.), Handbook of research on teacher education (2 ed., pp.
102-119). Nueva York: Macmillan.
Su-Chuan, H. (2009). Meeting the challenges of diversity: Beliefs of Taiwanese preservice
early childhood teachers. Tesis doctoral no publicada, Universidad de North Texas.
978-84-695-8363-0
159
Resumen
Las responsabilidades ticas son necesarias para crear una comunidad educativa,
global, plural y diversa. Pero no podemos entender estas sin hablar de gestin del
conocimiento. Esta se constituye como una necesidad en la educacin, considerndose
como una competencia bsica en los estilos de aprendizaje de acuerdo con lo dispuesto en
la Ley Orgnica de Educacin. No obstante la dificultad reside en analizar de qu modo
llevamos a cabo esta tarea. Tener competencia es poder decidir sobre algo. El trmino
competencia se refiere al modo en que una persona o institucin utiliza sus posibilidades
de decisin, esto es, al modo en que las decisiones adoptadas o las acciones realizadas
son "buenas". En este sentido, tener competencia es sinnimo de poseer un saber.
Descriptores: gestin del conocimiento, competencias, responsabilidades ticas.
Abstract
Ethic responsibilities are necessary in the global, plural and diverse educational
community. But we couldnt understand educational community without knowledge. This
is an educational necessity, and it is basic competence in the learning styles as an
Educational Organic Law. The first difficulty is analyzing how these tasks do. To have
competence is "decision". This word means how companies or persons must use the
different actions. To have "competence" is synonymous with "knowledge".
Keywords: knowledge, competences, ethics responsibilities.
Introduccin
La Ley Orgnica 1/1990 de 3 de Octubre, de Ordenacin General del Sistema
Educativo, establece como finalidad de las enseanzas proporcionar a los alumnos una
formacin de calidad y garantizar la cualificacin de futuros profesionales. Esto mismo se
contempla en la Ley Orgnica 10/2002 y la Ley Orgnica 2/2006 de 3 mayo. Adems
debemos constatar que en las ltimos aos se han producido importantes cambios en la
educacin. Pero cmo vamos a formar a profesionales si no adquieren compromisos con
su entorno? En la sociedad espaola actual, existen ms de seis millones de personas en
desempleo, uno de cada cuatro nios est en riesgo de exclusin social, y la pobreza est
cada vez ms extendida por ella por dnde vamos. Qu implicaciones tiene la enseanza si
978-84-695-8363-0
160
978-84-695-8363-0
161
El ser humano por necesidad se debe relacionar con otros y para ello debe cumplir
una serie de reglas de comportamiento, dependiendo del lugar y el tiempo en el que se
encuentre; estas obligaciones que cada individuo debe cumplir con los dems se les
denomina responsabilidades sociales.
En la actualidad la responsabilidad social se considera un concepto normativo no
obligatorio o ley blanda (es decir, sin la fuerza de la ley).
No obstante en la Ley Orgnica de Educacin se pretende que los estudiantes sean
capaces de integrar conocimientos y enfrentarse a la complejidad de formular juicios a
partir de una informacin que, siendo incompleta o limitada, incluya reflexiones sobre las
responsabilidades sociales y ticas vinculadas a la aplicacin de sus conocimientos y
juicios.
Luego el trmino "Responsabilidades ticas en la gestin del Conocimiento.
Propuestas para crear una comunidad educativa al Servicio de Instituciones y
Comunidades Globales, Plurales y Diversas" va a incluir las siguientes acepciones bsicas
expuestas en el apartado de resultados. Pero aqu el mtodo es el mtodo conductual de
ensear al alumnado a procesar con el corazn y con las emociones.
Resultados
El sistema educativo espaol, necesita un cambio, y en esta comunicacin,
proponemos ese cambio. En base a las necesidades emocionales y sociales que actualmente
tiene la sociedad.
Pretendemos que se tome en consideracin la Gestin del Conocimiento, como
valor importante para lograr el xito sostenible en cualquier organizacin, queremos que el
alumnado sea capaz de adquirir informacin, transformarla en conocimiento e
incorporarlo a la vida, para que sea capaz de poder convivir en sociedad de una manera
sostenible.
Establecemos la necesidad de garantizar la calidad en la educacin para todo el
alumnado, independientemente de sus condiciones y circunstancias, la equidad e igualdad
de oportunidades, la educacin inclusiva y la no discriminacin.
Pero para ello debemos garantizar una efectiva transmisin y puesta en prctica de
valores que favorezcan la libertad personal, la responsabilidad y la ciudadana democrtica,
la tolerancia y la igualdad, el respeto y la justicia, as como la no discriminacin.
978-84-695-8363-0
162
978-84-695-8363-0
163
Resumen
En Espaa se ha producido una incorporacin masiva de las mujeres a la educacin
superior. Sin embargo, este avance en el camino hacia la igualdad oculta otra realidad,
diversos informes que analizan la situacin de las mujeres en la universidad constatan su
posicin desigualitaria lo que aconseja desarrollar polticas activas para compensar y
prevenir la reproduccin de estas desigualdades y hacer efectivo el principio de equidad. En
este sentido la normativa vigente en igualdad de gnero establece la obligatoriedad de que
las instituciones pblicas, as como las grandes empresas, pongan en marcha planes de
igualdad. Este trabajo incorpora un anlisis sobre la situacin en la que se encuentran las
universidades espaolas respecto al proceso de implementacin de la igualdad efectiva de
mujeres y hombres en el mbito de la comunicacin igualitaria. En concreto, se lleva a cabo
un anlisis de los planes de igualdad aprobados en las universidades.
Descriptores: comunicacin igualitaria, igualdad de gnero, plan de igualdad.
Abstract
In Spain there has been a massive incorporation of women into higher education. However,
this advance on the road to equality hides another reality, several reports analyzing the
situation of women in college constantan inequitable position which advises develop active
policies to overcome and prevent the reproduction of these inequalities and fulfill the
principle of equity. In this respect the current regulations on gender equality establishes the
requirement that public institutions and large companies, to implement equality plans. This
work includes an analysis of the situation in which Spanish universities are on the process of
implementation of effective equality of women and men in the field of communication equally.
Specifically, it has carried out an analysis of equality plans approved in universities.
Keywords: egalitarian communication, gender equality, equality plan.
Introduccin
La presencia femenina en los diferentes mbitos de la vida pblica se ha ido
incrementando progresivamente en los ltimos tiempos. Un ejemplo de ello lo constituye la
incorporacin masiva de las mujeres a la educacin y, concretamente, a la educacin superior.
Sin embargo, estos avances en el camino hacia la igualdad ocultan otra realidad bien
diferente, diversos informes que analizan la posicin de las mujeres en la universidad
978-84-695-8363-0
164
978-84-695-8363-0
165
Resultados
Planes de igualdad en las universidades espaolas
El nmero de universidades que disponen de plan de igualdad asciende tan slo a
treinta y seis universidades (44.44%) predominando las universidades de titularidad pblica
(83.33%) puesto que nicamente seis universidades de titularidad privada cuentan con plan de
igualdad (Abat Oliva CEU, Internacional de Catalunya, Mondragn Unibertsitatea, Oberta de
Catalunya, Ramn Llull y Vic).
Ejes y acciones referidos a comunicacin igualitaria
La estructura de los planes analizados gira, casi siempre, en torno a ejes, lneas,
mbitos o reas de actuacin. As mismo, en cada uno de ellos, se especifican diferentes
acciones o medidas a desarrollar.
El nmero de ejes, lneas, mbitos o reas de actuacin que abordan los planes de
igualdad de las universidades asciende a un total de doscientos diecinueve, de ellos veinte
(9.13%) hacen referencia, de modo explcito, en su denominacin a comunicacin igualitaria
(tabla 1).
En lo referente al nmero de medidas o acciones especificadas en los planes, indicar
que hay un total de dos mil trescientas cincuenta y tres, de las cuales tan slo ciento cincuenta
y siete (6.67%) son acciones que abordan la comunicacin igualitaria.
Destacar que los planes de las universidades que presentan una mayor proporcin de
acciones de comunicacin igualitaria, en relacin con el total de acciones, son los de las
universidades Pblicas de Navarra, Politcnica de Cartagena, Pompeu Fabra y Vigo,
superando todos ellos el 12%.
Tabla 1
Ejes y acciones de los planes de igualdad de las universidades
Universidad
Abat Oliba CEU1
Alacant
Autnoma de Madrid
Cdiz
Cantabria
Carlos III de Madrid
Complutense
Extremadura
Autnoma de Barcelona
Barcelona
Girona
Granada
Huelva
Jan
Jaume I de Castelln
Lleida
Mlaga
Internacional de Catalunya
Mondragn Unibertsitatea
Ejes, mbitos,
reas (N)
Ejes de
comunicacin
igualitaria (N)
Acciones,
medidas (N)
Acciones de
comunicacin
igualitaria (N)
Acciones de
comunicacin
igualitaria
(%)
5
7
5
8
10
3
3
6
5
10
8
8
7
5
8
10
8
10
4
1
------1
----1
--1
--1
1
--1
1
1
--1
34
86
104
47
49
61
51
50
36
57
42
71
82
60
173
110
63
30
35
3
6
4
2
3
5
4
2
1
6
2
5
7
5
11
7
4
1
1
8.82
6.98
3.85
4.25
6.12
8.20
7.84
4.00
2.78
10.53
4.76
7.04
8.53
8.33
6.36
6.36
6.35
3.33
2.86
Oberta de Calalunya2
Oviedo
Pablo de Olavide
Pas Vasco
Politcnica de Cartagena
Politcnica de Catalua
Pompeu Fabra
Publica de Navarra
Ramn LLull
Rovira i Virgili
Salamanca1
Santiago de Compostela
Sevilla
Valencia-estudi general
Valladolid
Vic
Vigo
Total
978-84-695-8363-0
8
5
6
4
8
4
5
--5
6
7
5
7
5
4
6
4
219
1
1
1
--2
--1
------1
--1
1
--1
--20
48
82
53
43
36
--24
21
14
56
179
79
102
118
68
108
81
2353
166
--9
5
2
5
--3
3
1
1
7
2
5
13
5
7
10
157
--10.98
9.43
4.65
13.89
--12.50
14.29
7.14
1.79
3.91
2.53
4.90
11.02
7.35
6.48
12.35
6.67
978-84-695-8363-0
167
978-84-695-8363-0
168
978-84-695-8363-0
169
978-84-695-8363-0
170
978-84-695-8363-0
171
Resumen
El acceso a la educacin es un derecho bsico reconocido por la legislacin vigente en
materia de educacin y proteccin del menor, un derecho cuyo ejercicio se convierte en un
deber en el perodo de la escolaridad obligatoria. En este contexto, se entiende que el
absentismo escolar, problemtica con la que se enfrenta la comunidad educativa en la
actualidad, conculca el derecho a la educacin, convirtindose en factor de exclusin social
al comprometer el desarrollo acadmico y profesional de las y los menores. La legislacin
vigente establece la obligatoriedad de los poderes pblicos de intervenir para garantizar el
derecho a la educacin, adoptando medidas de accin positiva para apoyar la permanencia
de los grupos ms desfavorecidos en el sistema educativo. En la Comunidad Autnoma de
Galicia diversos municipios han implantado programas de prevencin y control del
absentismo escolar. Nuestro trabajo es producto de una revisin documental de dichos
programas.
Descriptores: equidad, calidad, diversidad, absentismo.
Abstract
Access to education is a basic right recognized by law in education and child protection, a
right that becomes a duty for the period of compulsory schooling. In this context, it is
understood that the truancy problem is facing the educational community today, violates the
right to education, becoming social exclusion factor compromising academic and
professional development of the minors. The legislation that mandates the government to
intervene to ensure the right to education by taking positive measures aimed at supporting
efforts to the most disadvantaged groups in the education system. In Galicia several
municipalities have implemented programs to prevent and control truancy. Our work is the
result of a literature review of these programs.
Keywords: equity, quality, diversity, truancy.
Introduccin
La Constitucin Espaola de 1978 establece, en su artculo 27, el derecho a la
educacin para todas las espaolas y todos los espaoles y encomienda a los poderes pblicos
que promuevan las condiciones necesarias y remuevan los obstculos para que este derecho
sea gozado en condiciones de igualdad por todos los ciudadanos y ciudadanas.
978-84-695-8363-0
172
Por otra parte, la Ley Orgnica de Educacin 2/2006 de 3 de mayo (LOE) mantiene el
derecho a una educacin bsica que permita el desarrollo de la personalidad y recuerda, as
mismo, la obligatoriedad de la misma en las etapas de la educacin primaria y en la educacin
secundaria obligatoria.
Sin embargo, en la actualidad el absentismo escolar se configura como una realidad
con la que se enfrenta la comunidad educativa y que pone en peligro una adecuada integracin
escolar y social del alumnado.
A este respecto, en el articulo 22 del Decreto 229/2011, do 7 de decembro, polo que se
regula a atencin diversidade do alumnado dos centros docentes da Comunidade Autnoma
de Galicia nos que se imparten as ensinanzas establecidas na Lei orgnica 2/2006, do 3 de
maio, de educacin, se considera el absentismo escolar como la ausencia al centro escolar y
sin causa debidamente justificada del alumnado en edad de escolarizacin obligatoria,
ausencia que supondr, al menos, un diez por ciento del horario lectivo mensual.
Este Decreto determina, adems, que se establecern mecanismos de coordinacin
entre las instituciones educativas y los poderes pblicos con competencia en la prevencin,
deteccin e intervencin ante situaciones de absentismo, desescolarizacin y abandono
escolar temprano, para lo cual se adoptarn los protocolos de actuacin que correspondan (art.
23).
Entre estas instituciones pblicas se encuentran las corporaciones locales, que deben
asumir una serie de competencias y funciones como responsabilidad de obligado
cumplimiento en el campo de la educacin. En este sentido, la Ley de Bases de Rgimen
Local 7/1985 de 2 de abril seala, en su artculo 25.2, que el municipio participar en la
vigilancia del cumplimiento de la escolaridad obligatoria; competencia tambin establecida en
el artculo 80.2. de la Ley 5/1997, de 22 de julio, de la Administracin local de Galicia.
En este contexto surgen distintas actuaciones llevadas a cabo por los ayuntamientos en
lo referente al absentismo escolar, como son los protocolos de absentismo escolar y los
programas de prevencin y control del absentismo escolar.
Mtodo
En este trabajo se ha llevado a cabo una revisin documental de los programas de
absentismo escolar desarrollados en diferentes municipios de la Comunidad Autnoma de
Galicia en los ltimos aos. Para ello se han utilizado dos fuentes de informacin: las pginas
web de los municipios del mbito territorial estudiado y la pgina web de la Consellera de
Educacin y Ordenacin Universitaria de la Xunta de Galicia. En concreto, se han analizado
los programas de los ayuntamientos de Bueu, Cangas, Pontevedra, Poio y Sanxenxo.
Cabe destacar que en este trabajo nicamente se han analizado los programas a los que
se ha podido acceder va web, aunque tenemos constancia de la existencia de otros programas
municipales.
978-84-695-8363-0
173
Resultados
Definicin, objetivos y destinatarios/as de los programas
La mayora de los programas municipales analizados se definen como programas de
prevencin y control del absentismo escolar.
En este sentido indicar que, en ellos, se considera el absentismo escolar como la falta
regular de asistencia y/o puntualidad a clase y sin motivo justificado del alumnado, bien sea
por voluntad del o de la menor o de sus progenitores o tutores/as legales.
Los objetivos con mayor presencia en los diferentes programas son los siguientes:
-
Fomentar el apoyo a las familias con menos recursos para que sus hijas e hijos
acudan a los centros educativos en igualdad de condiciones que el resto.
Absentismo activo:
Desescolarizacin: el alumnado, en edad de escolarizacin obligatoria, no est
matriculado en ningn centro educativo.
Absoluto o total: el alumnado, en edad de escolarizacin obligatoria, est
matriculado pero no asiste nunca al centro educativo.
978-84-695-8363-0
174
Otros:
Encubierto por las familias: el alumnado falta a clase por diversos motivos y
sus progenitores lo excusan.
Familiar o por exceso: los progenitores o representantes legales tienen al
alumnado ms tiempo del que deben en el centro escolar, bien por llegar muy
pronto o por retrasarse en recogerlos a la hora de salida.
978-84-695-8363-0
175
TIPOS DE
ABSENTISMO
ABSENTISMO
ACTIVO
ABSENTISMO
PASIVO O
PRESENCIAL
OTROS
Desescolarizacin
Absoluto o total
Familiar o por
exceso
Crnico
Puntual o
intermitente
De temporada
978-84-695-8363-0
176
Faltas de asistencia de alta intensidad: son aquellas en las que el alumnado falta
ms de la mitad del horario lectivo o deja de asistir.
Resulta tambin importante aclarar que el cmputo de las faltas difiere segn el nivel
educativo. De este modo en educacin primaria las faltas se contabilizan por sesiones (en los
centros con jornada partida, una sesin de maana y otra de tarde, en tanto que, en los centros
con sesin nica, se cuentan dos sesiones por maana) mientras que, en educacin secundaria,
se contabilizan por horas lectivas. Por otra parte, en la determinacin de conductas
absentistas, se define la falta de puntualidad como el retraso del alumnado en la incorporacin
al centro escolar una vez que toca el timbre y/o se cierran los accesos al mismo. La tipologa
de faltas de puntualidad es la siguiente:
-
Por exceso: se produce cuando las madres, padres o tutores/as legales llevan con
mucha antelacin al alumnado al centro antes de comenzar la jornada escolar o
tardan en recogerlo a la salida ms de diez minutos.
Llegados a este punto resulta preciso destacar la ausencia de un criterio unnime en los
distintos programas en lo que respecta al nmero de faltas necesario para considerar que una
alumna o alumno es absentista, pudiendo producirse las siguientes valoraciones:
-
978-84-695-8363-0
177
Por otra parte, se considera que un alumno/a es absentista pasivo cuando se dan tres o
ms de las siguientes conductas de forma reiterada en el transcurso de un mes:
-
Deja las pruebas, exmenes u otro tipo de cuestionario en blanco, casi en blanco o
contesta sin sentido.
978-84-695-8363-0
178
Servicios Sociales: cuando el origen del absentismo se encuentra en factores sociofamiliares el caso se deriva a servicios sociales.
978-84-695-8363-0
179
978-84-695-8363-0
180
Resumen
La comunicacin igualitaria es uno de los elementos fundamentales en el avance hacia la
igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres, en tanto que el lenguaje juega un papel
determinante en los procesos de socializacin y de construccin de la imagen social
vinculada al gnero. Por tanto, parece necesario el desarrollo de medidas vinculadas al uso
correcto del lenguaje y que eviten la transmisin de estereotipos de gnero. En este contexto
se sita este trabajo, cuyo objetivo es mostrar algunos de los resultados obtenidos en el
anlisis de las medidas para el fomento de la comunicacin igualitaria en los Planes de
Igualdad de diferentes ayuntamientos de la Comunidad Autnoma de Galicia. Para ello se
procedi a realizar un anlisis documental de dichos planes, procurando informacin sobre
actuaciones referidas, entre otros aspectos, al uso no sexista del lenguaje y la imagen y el
uso de materiales que promuevan la igualdad.
Descriptores: comunicacin igualitaria, igualdad, gnero, Planes de Igualdad, Galicia.
Abstract
Equal communication is one of the key elements in the progress towards equal opportunities
between men and women, while language plays a decisive role in the processes of
socialization and social construction of the image linked to gender. Therefore, it seems
necessary to develop measures related to the correct use of language and that avoid gender
stereotypes. In this context, the aim of this paper is to show some of the results obtained in the
analysis of measures for the promotion of egalitarian communication of Equality Plans from
different municipalities of Galicia. To do this, we proceeded to make a documentary analysis
of such plans, seeking information on actions related to the use of non-sexist language and
image and the use of materials which promote equality, among others.
Keywords: equal communication, equality, gender equality plans, Galicia.
978-84-695-8363-0
181
Introduccin
Son numerosas las referencias legislativas que establecen la igualdad de derechos
entre mujeres y hombres. Desde 1945, ao en que las Naciones Unidas asumieron en su carta
fundacional el compromiso con la igualdad, fueron numerosos los acuerdos internacionales,
estrategias e instrumentos jurdicos adoptados que apostaron por la igualdad de oportunidades
entre ambos sexos. Fecha clave en este avance lo supone el ao 1975, declarado Ao
Internacional de la Mujer, a partir del cual se sucederan toda una serie de conferencias
mundiales sobre las mujeres (Mxico, 1975; Copenhague, 1980; Nairobi, 1985; Beijing,
1995), en las que fueron elaboradas propuestas para las diferentes regiones del mundo.
A nivel europeo, la igualdad entre mujeres y hombres es un principio fundamental del
derecho comunitario, formando parte, desde la creacin de la Comunidad Econmica Europea
en 1957, de los diferentes tratados.
Por lo que respecta al estado espaol, los artculos 9.2 y 14 de la Constitucin de 1978,
establecen los principios de igualdad ante la ley y de responsabilidad de los poderes pblicos
en la promocin de condiciones efectivas y reales de igualdad y libertad, prohibindose la
discriminacin de cualquier tipo. A este principio constitucional le sucedern toda una serie
de normas legislativas en materia de igualdad.
En el mbito de la Comunidad Autnoma de Galicia, el artculo 4.2 del Estatuto de
Autonoma de Galicia de 1981 establece como competencia de los poderes pblicos promover
las condiciones para que la libertad y la igualdad del individuo y de los grupos en los que se
integra sean reales y efectivas, eliminar los obstculos que impidan o dificulten su plenitud,
as como facilitar la participacin de todas las personas gallegas en la vida poltica,
econmica, cultural y social.
Resulta evidente que la igualdad formal de todas las personas ante la ley es un derecho
reconocido en las sociedades democrticas y, aunque ha constituido un paso decisivo en la
conquista de la igualdad, sin embargo, este reconocimiento legal ha resultado ser insuficiente
para hacer plenamente realidad la equidad. De este modo, la igualdad plena, efectiva, entre
mujeres y hombres, es todava hoy una tarea pendiente que precisa de nuevas medidas para
hacerla efectiva.
A este respecto, la Ley orgnica 3/2007, de 22 de marzo, para la igualdad efectiva de
mujeres y hombres, establece la obligatoriedad por parte de las instituciones pblicas, as
como de las grandes empresas, de poner en marcha planes de igualdad, definindolos como
un conjunto ordenado de medidas, adoptadas despus de realizar un diagnstico de situacin,
tendentes a alcanzar en la empresa la igualdad de trato y de oportunidades entre mujeres y
hombres y a eliminar la discriminacin por razn de sexo (artculo 46.1).
Los planes de igualdad permiten propiciar la asuncin por parte de la sociedad de los
principios y derechos reconocidos en la legislacin, adems de contribuir a mejorar la
situacin social, poltica, econmica, familiar y cultural de la ciudadana promoviendo la
igualdad de gnero. Son instrumentos que fomentan la poltica de igualdad llevada a cabo por
diversas instituciones, entre ellas, los ayuntamientos.
Una de las dimensiones que hacen posible y en las que se manifiesta la igualdad entre
mujeres y hombres es la comunicacin. El lenguaje, que est en la base de todas las relaciones
978-84-695-8363-0
182
978-84-695-8363-0
183
Tabla 1
Planes de igualdad que componen la muestra
Provincia
Municipio
Aranga
Arteixo
A Corua
Lugo
Perodo
N ejes o
reas
Cdigo
2010-2014
P1
2010-2014
P2
Riveira
2011-2014
12
P3
Teo
2010-2014
P4
Foz
2009-2012
P5
Monforte de
Lemos
2009-2012
10
P6
Rbade
2009-2013
P7
2010-2014
12
P8
2010-2013
P9
2010-2014
P10
2009-2012
P11
Orense
Orense
Pior
Poio
Pontevedra
O Grove
Resultados
La comunicacin igualitaria est presente, explcita o implcitamente, en la totalidad
de planes analizados. A continuacin se presentan los principales resultados derivados del
anlisis de contenido realizado, centrando la atencin en aquellas actuaciones que de forma
ms explcita se dirigen a potenciar el uso del lenguaje y la imagen de un modo inclusivo. La
figura 1 constituye una sntesis de las mismas.
978-84-695-8363-0
184
El uso de un lenguaje no sexista es uno de los principales elementos que abordan los
planes de igualdad analizados en relacin con la comunicacin igualitaria, de forma que, la
gran mayora, nueve de ellos, contemplan propuestas de actuacin en esta lnea. Muchas de
estas medidas se concretan en la inclusin de la perspectiva de gnero en los documentos de
carcter administrativo, tanto a travs de la revisin y modificacin de la documentacin
actual como de la formacin y asesoramiento lingstico a los trabajadores y departamentos
implicados en la administracin local. Para ello, en algunos casos, se propone la difusin de
guas especficas sobre el uso del un lenguaje inclusivo. Ejemplos como los que siguen se
encaminan en esta lnea de trabajo:
Normalizacin del uso de un lenguaje no sexista en los documentos generados tanto
para uso interno como para la informacin a la ciudadana, en las publicaciones y en
las disposiciones municipales a travs del asesoramiento por parte del Servicio de
Normalizacin Lingstica y de la distribucin de una gua sobre el lenguaje
administrativo no sexista (P1).
Revisar y modificar la documentacin administrativa general del ayuntamiento y de
las concejalas (produccin documental, divulgacin, folletos informativos,
formularios, registros) en su lenguaje e imgenes (P6).
Tambin vinculada a la documentacin que se genera desde la administracin local,
otra de las propuestas que forma parte de la mayora de planes analizados, presente en ocho de
ellos, es la relativa contemplar los datos desagregados por sexo en los estudios, estadsticas,
informes y otros materiales. Entre las medidas especficas propuestas podemos destacar, a
modo de ejemplo:
Informar y formar al personal del ayuntamiento () de la relevancia de la
produccin y manejo de los datos desagregados por sexo (P8).
Planificacin de una herramienta que permita desagregar los datos principales del
mbito municipal segn gnero (P10).
Forma parte, asimismo, de la preocupacin de los municipios trabajar en aras a la
consecucin de un mejor uso del lenguaje y las imgenes en el mbito de la publicidad,
teniendo en consideracin la influencia de esta en la presencia o persistencia de roles y/o
estereotipos sexistas. Por ello, ms de la mitad de los planes analizados, seis de ellos, incluyen
978-84-695-8363-0
185
978-84-695-8363-0
186
978-84-695-8363-0
187
FETE-UGT (2009). Educar en igualdad. Gua para el profesorado. Madrid: Instituto de la Mujer. Recuperado
de http://www.educarenigualdad.org/media/pdf/uploaded/old/Mat_203_profesor_castellano_1_.pdf
Ley orgnica 3/2007, de 22 de marzo, para la igualdad efectiva de mujeres y hombres. Boletn
Oficial del Estado, 23/03/2007.
Xunta de Galicia (2013). VI Plan Galego para a igualdade entre mulleres e homes. Estratexia 20132015. Recuperado de: http://igualdade.xunta.es/sites/default/files/files/documentos/viplan2.pdf
Referencias del anlisis documental. Planes consultados
II Plan Municipal de Igualdade de Oportunidades entre Mulleres e Homes. Concello de Aranga.
Recuperado de http://www.aranga.es/servizos-municipais/servizos-sociais/novas-ss/62-novasss/21-ii-plan-de-igualdade-entre-homes-e-mulleres-de-aranga-2010-2014
Plan Municipal de Igualdade de Oportunidades entre Mulleres e Homes de Arteixo. Recuperado de
http://www.arteixo.org/servicios/cmuller/2010/iipiom.pdf
I
Plan
de
Igualdade-Concello
de
Foz.
Recuperado
http://igualdade.xunta.es/sites/default/files/files/documentos/Plan_igualdade_foz.pdf
de
I Plan para a igualdade de oportunidades entre mulleres e homes do Concello de Monforte de Lemos. Recuperado
de http://www.monfortedelemos.es/recursos/documentos/Plan_de_Igualdade_de_Oportunidades_.pdf
I Plan de igualdade de oportunidades entre mulleres e homes do Concello do Grove. Recuperado de
http://igualdade.xunta.es/sites/default/files/files/documentos/Plan_igualdade_grove.pdf
II Plan municipal de igualdade de oportunidades entre homes e mulleres de Pior. Recuperado de
http://igualdade.xunta.es/sites/default/files/files/documentos/Plan_igualdade_pinhor.pdf
II Plan de igualdade de oportunidades entre mulleres e homes do Concello de Poio. Recuperado de
http://www.concellopoio.com/arquivos/file/pdfs/cidadania/cim/2012/PLAN%20IGUALDAD
E%20cr%C3%A9ditos.pdf
I Plan de Igualdade entre homes e mulleres do Concello de Rbade. Recuperado de
http://www.concellorabade.es/portal_localweb/RecursosWeb/DOCUMENTOS/7/0_870_1.pdf
II Plan de igualdade entre mulleres e homes. Concello de Riveira. Recuperado de
http://www.riveira.es/images/content/galeria/servizos_sociais/piom_decembro.pdf
II
Plan
de
igualdade.
Concello
de
Teo.
Recuperado
de
http://www.concellodeteo.com/mediateca/imxd/albumes/imx/1322649831iiplanigualdade.pdf
978-84-695-8363-0
PARTE II
189
978-84-695-8363-0
191
Abstract
In the United States, the No Child Left Behind Act (NCLB) in 2001 and Individuals with
Disabilities Education Act (IDEA) in 2004 have together made it possible for students with
diverse educational needs to be educated in general education classrooms. To be able to
address students needs efficiently and effectively, teachers need to collect data on students
current level of performance, design instruction using evidence-based strategies, implement
instruction, and evaluate effectiveness of their instruction by continuously monitoring student
achievement. Using hypothetical cases, this paper illustrates use of curriculum-based
measurement (CBM), a research validated approach, to assess and progress monitor
students performance in reading and mathematics.
Keywords: Data-based decisions, Curriculum-based measurement, Assessment, Progress
monitoring, Teacher education, Diversity in classrooms.
Resumen
En los Estados Unidos, No Child Behind Act (NCLB), en el ao 2001, e Individuals with
Disabilities Education Act (IDEA), en 2004, han hecho posible juntos que estudiantes con
diversas necesidades de aprendizaje fueran educados en rgimen ordinario. Para poder
atender las necesidades de los estudiantes de forma eficiente y eficaz, los maestros necesitan
recopilar datos sobre el nivel curricular de los estudiantes, disear programas utilizando
estrategias basadas en la evidencia, implementarlos y evaluar la efectividad de su actuacin,
monitorizando continuamente los logros de los estudiantes. Utilizando casos hipotticos, este
documento ilustra el uso de medicin basado en el plan de estudios (CBM), un enfoque de
investigacin validado, para evaluar y progresar en los resultados en lectura y matemticas
de los estudiantes.
Descriptores: Las decisiones basadas en datos, Medidas basadas en el currculo,
Evaluacin, Progreso de vigilancia, Formacin docente, Diversidad en las aulas.
Introduction
Todays startling classroom diversity reflects a major demographic shift around the
world. The greatest wave of immigrants since the turn of the century is creating a society with
no distinctive majority and with a student population enormously mixed never before seen in
single schools and classrooms (Barton, & Armstrong, 2007; Shulman, & Mesa-Bains, 1993).
In the United States, the No Child Left Behind Act (NCLB) in 2001 and Individuals with
978-84-695-8363-0
192
Disabilities Education Act (IDEA) in 2004 have together made it possible for students with
diverse educational needs to be educated in general education classrooms. These laws also
require that students with diverse educational needs in classrooms have access to the same
curriculum as everyone else. More recent educational reforms and a push towards standardsbased education requires more than mere physical accesses to general education classrooms
for these students with diverse educational needs. These educational reforms also require that
all students have access to general education curriculum. Access to general education
curriculum is no longer synonymous with access to general education classrooms, and the
laws require that students who cannot not be physically included in general education
classrooms also be given opportunity to learn the same content, thus making access to general
education curriculum, if not general education classrooms, possible for all.
In schools across the United States a three-tier model of intervention, also known as
RtI or Response to Intervention, is employed to assess and teach all students. Since the
passage of Individuals with Disabilities Education Improvement Act (IDEIA) or IDEA
(2004), this three-tier model has been assisting teachers in providing all students in
contemporary classroom pre-referral early intervention services, thus reducing a need for
possible special education referral. Educators are required to document all efforts made to
provide quality, research-based core curriculum to all students, giving all a fair chance to
improve, before any possible referral can be made for special services. The intensity of
intervention increases across the three levels starting with the first tier and the student
gradually moving up to the third level if intervention provided at the lower level is found to
be not helping student. A noteworthy point to be made is possibility of a two-way movement
of students in this intervention process. This ensures that students who respond to timely
more intensive intervention at a higher (second and third) tier or level has a chance to be
move back to the tier-1 intervention level. A key requirement of the process of providing this
pre-referral intervention in different tiers is to consistently and regularly document and
monitor these efforts and students response to these efforts/intervention. Students movement
up the three-tier process is based on the documentation of an existing discrepancy in
performance between the student(s) and their peers. These educational reforms have also
resulted in increasing the level of accountability expected of education professionals in
meeting high standards for student achievement (Stecker, Lembke, & Foegen, 2008). To be
able to keep track of students achievement, educators in contemporary classrooms have to be
competent in assessing students baseline performance in all academic areas and behavior, set
appropriate goals based on their baseline performance, implement evidence-based instruction,
monitor students progress as a result of their intervention, evaluate effectiveness of
intervention, and make continued decisions about further instruction. In short, to be able to
address students needs efficiently and effectively, teachers need to be competent in assessing
and progress monitoring. In contemporary classrooms, all educators trying to meet demands
of diversity need to understand the critical importance of collecting data for regular
monitoring of students progress and make instructional decisions based on this data.
This paper highlights use of curriculum-based measurement (CBM) that classroom
teachers can use to assess students baseline performance, set realistic goals/objectives based
on researched-based norms, implement academic and behavioral intervention using evidencebased practices, and monitor student progress towards the goals set, and make data-based
decisions. CBM is a formative, repeated, and ongoing approach to assessment, rather than a
summative assessment approach given one point in time at the end of an intervention.
978-84-695-8363-0
193
Method
Described in this paper are four hypothetical examples of progress monitoring in areas
of reading, and mathematics to illustrate use of curriculum-based measurement to assess
present level of performance of students in reading and mathematics, set relevant goals, and
decide evidence-based instructional practices based on regular progress monitoring data. The
four cases illustrated (see Figure 1, Figure 2, Figure 3, & Figure 4) are at four different grade
levels. A brief listing of general steps educators can use to assess baseline performance,
provide intervention, and monitor progress to make data-based decisions in the areas of
reading and mathematics follows after description of CBM precedes a detailed description of
the process, followed by graphical representation of progress monitoring in reading and
mathematics.
Curriculum-based measurement
Deno (2003) described CBM as a set of standard procedures which are technically
adequate, have standard measurement tasks, prescriptive stimulus materials, details of
administration and scoring, are time efficient, and easy to use. Reliability and validity, the two
primary characteristics of CBM according to Deno have been achieved through standardized
observational procedures for repeatedly sampled performance on core reading, writing, and
arithmetic skills. Specific design criteria of CBM that include having sufficient reliability and
validity, ease in using and understanding which makes it convenient for teachers to employ
them easily, ease of explaining the results to others, and comparatively inexpensive measures
making it easy for school-wide use (Overton, 2012). There is about 27 years of research to
support these valid and reliable measures used by educators to assess and monitor student
achievement in classrooms. Stecker, et al. (2008) cited several studies done between 1988 and
1995 that researched into the technical adequacy of CBM. The authors describe yet another
benefit of CBM as being less susceptible to possible bias associated with gender, race or
ethnicity, or disability status than some other types of assessment, because the measures rely
on direct assessment of student performance. CBM is a formative evaluation as students
progress is measured during the acquisition of a skill and as such, it is an optimal assessment
technique for monitoring progress.
Curriculum-based measurement, tasks, and administration
The following general procedures can be used by teachers in using CBM in the areas
of reading and mathematics. Most literature (Espin, Busch,& Shin, 2005;Fore, Boon, Lawson,
& Martin, 2007; Fuchs, Fuchs, Hamlett, Philips, & Bentz, 1994; Hosp, & Hosp, 2003; Hosp,
Hosp, & Howell, 2007; Overton 2012; Shin, Stanley, Deno, & Espin, 2000; Stecker, et al.
2008) discussing use of CBM by educators describe steps in administering CBMs. Following
are general steps used in administering measures described in this paper. A detailed
discussion for specific measures (probes), sources of measures follow these general steps:
Identify students (student) to assess and decide on the area (mathematics, reading,
content area, writing) and the component or skill (fluency, vocabulary,
comprehension, computation, math facts, etc.) to be assessed and intervened
Collect different but equivalent grade-level probes (for baseline score and progress
monitoring scores)
For each probe, have both teachers copy with correct answers and students copy
without these clues;
978-84-695-8363-0
194
978-84-695-8363-0
195
978-84-695-8363-0
196
Results
Case 1:
John is a 7th grader and struggles in both
reading and mathematics. Based on his
scores he is considered to be at risk of
failure in both reading and mathematics.
John has been struggling with OCD
(obsessive compulsive disorder) for many
years. John is able to work independently
and does ask questions. In reading first
MAZE probes were used at 7th grade level.
However, his scores indicate a below
average level of performance and he is
assessed and found to be at average level or
instructional level at 7th grade. His baseline
and progress monitoring as such are done
with 7th grade MAZE passages.
25(baseline)+(1.5[growth rate]x16[# of
sessions]) == 49 [goal] words correctly
restored (WCR)
In 8 weeks or 16 sessions, John will
restore49 words in 3 minutes from Grade 7
MAZE progress monitoring passages with
no more than 3 errors. For progress
monitoring two new passages at Grade 7
level were obtained from AIMSWeb were
administered finding a mean of the two
obtained scores as the data score for the
session
Figure 1. Case one showing details of Johns intervention and progress monitoring in reading
comprehension using Grade 7 MAZE probes
Case 2:
Jaclyn is a lovable 3rd grader, confident,
observant, with a keen interest in learning
new things. Jacky has slight spasticity in her
right side which has also affected herspeech
to a certain extent. She struggles with reading
fluency and mathematical commutations.
Based on her assessment results Jackys
teacher decided to provide intervention to
improve her reading fluency. After the initial
administration
of
reading
fluency
passages(probes) at Third Grade using RCBM passages , her instructional level was
determined to be at Grade 2 (average) level
for words read correctly in one minute. As
such her baseline in reading fluency and
progress monitoring was carried out with
reading fluency probesR-CBM at Grade Two
obtained from AIMSWeb.
82(baseline)+(1[growth
rate]x16[#
of
sessions]) =98[goal] words read correctly
(WRC)
In 8 weeks or 16 sessions, Jaclyn will read98
words correctly with no more than 2 errors in
1 minute using Grade 3progress monitoring
passages.
978-84-695-8363-0
197
106 E 12
97 E 8
Progress Monitoring
2/11
2/13
89 88 95 93
88.5E10
94E 8
104
104 E 10
3/4
110
107
108.5 E 3
2/18
89 93
91E 9
3/6
114
116
115 E 2
Jaclyn is in grade 3 but her level had to be dropped as she was at frustration, below average at
Grade 3
Figure 2. Case two showing details of Jaclyns intervention and progress monitoring in reading
fluency using Grade 2 reading fluency probes
978-84-695-8363-0
Case 3:
Jaime is a 6th grader struggling with multiple step
multiplication and division problems. To find her
instructional level teacher picks up three sixth
grade probes from AIMSWeb and reads the
directions to Jaime and administers the three
probes giving two minutes for each probe. After
scoring the probes Jamie scores 25, 29 and 40
correct digits. A median point of 29 is point
above the 50th percentile, which is at (average)
instructional level. The baseline of 29 is a
reference point to be used to find the aim goal
and then the aim-line. To obtain the aim goal the
teacher takes the baseline data point of 29 and
added it to the number of weeks 8 (16 sessions)
multiplied by a realistic weekly growth rate of
.45 digits correct. The equation is as follows:
29+(16*.45)= 36 (rounded) correct digits. This
means that after 8 weeks of intervention Jamie
should be scoring 36 correct digits. Jaimes goal
in math is as follows: In eight weeks, Jaime will
score 36 correct digits in 2 minutes using 6th
grade math CBM progress monitoring probes
from AIMSWeb. Jaime will receive intervention
over the eight weeks working on multiplication
and division with twice weekly progress
monitoring.
Data 3
198
Baseline
Progress Monitoring
3/6 3/6 3/6
3/11
3/13
3/18
25 29 40
27
30
29
29
Progress Monitoring
3/20
3/25
3/27
4/1
4/3
32
33
31
35
36
Dates
CDs
Figure 3. Case three showing details of Jamies intervention and progress monitoring in mathematics
computation using Grade 6 probes
Case 4:
Justin is a student in 9th grade in a general
education classroom. Justins primary difficulties
in math lie with computation and complex word
problems. Specific difficulties in these areas
include numeration (he sometimes does not
properly add, subtract, multiply, or divide,
especially when working with negative numbers,
fractions, and decimals) and the ability to properly
interpret word problems into solvable equations
and values.Justins instructional level is found at
Grade 8 and he is given Grade 8 concepts and
applications (M-CAP) probes where he scored
12,17,14 points placing him at between 50th and
75th percentile (average learner) with a media of
14 points. His goal was thus calculated with a
growth rate of .75 per session as 14 + (16*.75) =
26 points on probes, which will put him in 90th
percentile as per the norms. The goal as such will
be: In 8 weeks Justin will score 26 points on
AIMSWeb Grade 8 M-CAP probes in 10 minutes
with intervention and twice weekly progress
monitoring.Justin is in grade 9. However he is
given Grade 8 probes at his instructional level.
978-84-695-8363-0
199
Data 4
Baseline
Progress Monitoring
3/12 3/12 3/12
3/19 3/21
3/26
12
14
17
18
17
20
14
Progress Monitoring
3/28
4/2
4/4
4/9
4/11
21
20
25
25
26
Dates
Points
Figure 4. Case four showing details of Justins intervention and progress monitoring in mathematics
concepts and applications using Grade 8 probes
978-84-695-8363-0
200
Conclusion
The four hypothetical cases in this paper are discussed to give an overview of how
curriculum based measurement or CBM can be administered in all classrooms by teachers to
assess current level of performance of their students in areas of need, such as reading, and
mathematics using specific grade-level content. This paper illustrated use of CBM in the areas
of reading fluency, reading comprehension, mathematical computations, and mathematical
concepts and applications. CBM can also be used for assessing and providing intervention in
early reading and early numeracy skills, as well as spelling, writing, and in content area
instruction. There is a need worldwide for competent teachers able to address diversity in
their classrooms that may be related to culture, ethnicity, ability/disability, social class,
religious beliefs, and gender/sexual orientation. CBM, which is research validated, formative
approach to assessment, empowers teachers to address this diversity. Being a formative (given
repeatedly over time) assessment, CBM helps teachers gather data on students achievement
on an ongoing basis. The process of gathering data to make educational decisions also forms
an integral part of response to intervention (RTI) process. RTI is essentially a process for
providing early intervention and to ensure that educators address problems efficiently, and in
a timely manner, giving a fair chance to all students to reach their full potential. With
diversity becoming a norm in contemporary classrooms, a valid and reliable measure such as
CBM is a dependable tool which teachers can use to assess students diverse needs, plan and
implement intervention in response to these needs, monitor students response to intervention,
evaluate effectiveness of intervention, and make ongoing data-based decisions to provide
timely assistance to all students.
References
Barton, L., & Armstrong, F. (2007). Policy, experience, and change: Cross cultural
reflections
on inclusive education. Dordrecht: Springer.
Deno, S. L. (2003). Developments in curriculum-based measurement. The Journal of Special
Education,
37(3),
184-192.
Retrieved
from
http://search.proquest.com/docview/194702550?accountid=15099
Espin, C. A., Shin, J., & Busch, T. W. (2005). Curriculum-based measurement in the content
areas: Vocabulary matching as an indicator of progress in social studies learning. Journal
of
Learning
Disabilities,
38(4),
353-363.
Retrieved
from
http://search.proquest.com/docview/194226400?accountid=15099
Fore, C., Boon, R. T., Lawson, C., & Martin, C. (2007). Using curriculum-based
measurement for formative instructional decision-making in basic mathematics skills.
Education,
128(2),
324-332.
Retrieved
from
http://search.proquest.com/docview/196412997?accountid=15099
Fuchs, L. S., Fuchs, D., Hamlett, C. L., Phillips, N. B., & Bentz, J. (1994). Classwide curriculumbased measurement: Helping general educators meet the challenge of student diversity.
Exceptional
Children,
60(6),
518-537.
Retrieved
from
http://search.proquest.com/docview/201099816?accountid=15099
978-84-695-8363-0
201
Hosp, M. K., & Hosp, J. L. (2003). Curriculum-based measurement for reading, spelling, and
math: How to do it and why. Preventing School Failure, 48(1), 10-17. Retrieved from
http://search.proquest.com/docview/228549057?accountid=15099
Hosp, M., Hosp, J., & Howell, K. (2007).The ABCs of CBM: A practical guide to curriculumbased measurement. New York, NY: The Guilford Press.
Overton, T. (2012). Assessing learners with special needs: An applied approach (7th Ed.).
Boston, MA: Pearson.
Schulman, J., & Mesa-Baines, A. (1993). Diversity in the classrooms: A casebook for
teachers and teacher educators. Hillsdale, N.J: Published collaboratively by Research for
Better Schools and Lawrence Erlbaum Associates.
Stecker, P. M., Lembke, E. S., & Foegen, A. (2008). Using progress-monitoring data to
improve instructional decision making. Preventing School Failure, 52(2), 48-58.
Retrieved from
http://search.proquest.com/docview/228552068?accountid=15099
978-84-695-8363-0
202
Resumen
Para que una educacin sea de calidad ya no es suficiente que los estudiantes aprendan, es
necesario que se trabaje desde y para la justicia social. El objetivo de este trabajo es
identificar las estrategias docentes de atencin a la diversidad que utilizan los docentes en el
aula desde una perspectiva de la justicia social. Para lograr este objetivo se elabora un
estudio etnogrfico de carcter cualitativo en un instituto de secundaria con un fuerte
compromiso por la justicia social. Los principales resultados de la investigacin muestran
que los docentes que atienden a la diversidad en las aulas desde la perspectiva de la justicia
social se caracterizan por generar un clima de aula especial. Por ello, repensar las
estrategias didcticas, redistribuyendo los recursos y esfuerzos focalizado en aquellos que
mas lo necesita, se presentan en esta comunicacin como un camino claro para lograr una
educacin y una sociedad ms justa.
Descriptores: Justica social, Atencin a la diversidad, Mejora educativa, Estrategias
docentes en el aula.
Abstract
For a quality education is not only enough the learning of the students, but it is necessary to
work from and for Social Justice. The aim of this research is to identify teaching strategies to
attend the diversity used by teachers in the classroom from the perspective of social justice.
To achieve this goal, this study develops a qualitative ethnographic approach in a secondary
school with a strong commitment to social justice. The main result is that teachers who attend
the diversity in his classroom from the perspective of social justice are characterized by
create a special classroom climate. For that reason, rethink teaching strategies,
redistributing resources and efforts focused on those who need it most, are presented in this
paper as a clear path to achieve a fairer education and fairer society.
Keywords: Social justice, Attention to diversity, Educational improvement, Teaching
classroom strategies.
Introduccin
En estas ltimas dcadas el concepto justicia social ha adquirido cada vez ms fuerza y
relevancia. Aspectos como los movimientos migratorios, las nuevas formas de relacionarse, la
globalizacin, las polticas y las crisis econmicas, han aumentado la brecha entre los ms
978-84-695-8363-0
203
978-84-695-8363-0
204
Los docentes requieren una formacin en las correspondientes estrategias para abordar
las cuestiones de la opresin y discriminacin, y actuar positivamente en la formacin de sus
estudiantes. Como docentes podemos empezar preguntando si estamos haciendo una
diferencia en el mundo (Ayers 1993; Simmons y Kameenui, 1998), puesto que los docentes
que educan para conseguir una sociedad ms justa quieren potenciar un cambio positivo en la
escuela.
Siguiendo a Au, Bigelow y Karp (2007) plantean ocho premisas bsicas para ejercer
una docencia orientada a la justicia social. Por ello consideran que las prcticas docentes
deben ser fundamentadas en las vidas de nuestros estudiantes; ser docentes crticos; tener una
mentalidad multicultural, antirracista y projusticia; promover una docencia participativa y
vivencial; ser un docente esperanzado, alegre, amable, y visionario; ser comprometido y
activista; ser un docente acadmicamente riguroso y tener una especial sensibilidad cultural.
Asimismo, Swindler (2008) reflexiona que las aulas y sus docentes pueden ser lugares
idneos en los que dar a los estudiantes vislumbre el tipo de sociedad en la que puede vivir;
ms all de lo que pueden vivir en la sociedad; para construir docente y estudiantes los
ciudadanos del hoy y la sociedad del maana.
Mtodo
La presente comunicacin se enmarca dentro del proyecto de concurrencia competitiva
I+D+i que llevo a cabo el grupo de investigacin cambio educativo para la justicia social
durante el ao 2011.
Los objetivos especficos de esta comunicacin y que se enmarcan en la investigacin
anteriormente citada son:
Identificar docentes de centros de educacin secundaria que potencien y consigan el
desarrollo de todos sus estudiantes independientemente de sus caractersticas sociales
o personales.
Describir las prcticas que desarrollan los docentes para la justicia social y que los
definen como tales.
Comprender la forma en que estos docentes inciden en la comunidad escolar.
Para la realizacin de esta investigacin se realiz una aproximacin mediante un estudio
de carcter cualitativo exploratorio que posibilite determinar las prcticas de los docentes en
contextos altamente heterogneos, para comprender las estrategias educativas que utilizan y
su implicacin en el centro educativo y en el proceso de enseanza aprendizaje de los
estudiantes.
El enfoque metodolgico utilizado ha sido el estudio de casos de carcter instrumental; con el
fin de estudiar, conocer y comprender en profundidad docentes y sus prcticas socialmente
justas, siempre dentro del contexto de centro en el que se encuentran. Este enfoque
metodolgico posibilitar estudiar tanto aspectos de carcter personal que influyen en los
agentes para que consideren la direccin para la Justicia Social, como aspectos de carcter
organizativo, especialmente el referido a la cultura y clima escolar.
Los docentes estudiados en esta investigacin son del IES Madrid Sur, situado en el
distrito de Vallecas, zona especialmente vulnerable por su heterogeneidad e inequidades de
sus habitantes. El IES Madrid Sur es un centro idneo para la realizacin de esta
978-84-695-8363-0
205
investigacin, especialmente porque tiene un fuerte compromiso por una escuela y una
sociedad ms justa. El trabajo de campo se llev a cabo en los meses de abril y mayo de
2012.
Las categoras de anlisis estudiadas en la investigacin han sido:
Caractersticas del docente.
Prcticas del docente en trminos de estrategias didcticas.
Actitudes del docente hacia la educacin de sus estudiantes.
La informacin del presente estudio cualitativo ser recogida a travs de las siguientes
estrategias e instrumentos:
Observacin no participante por parte de los investigadores, tanto de las prcticas del
docente como de las dinmicas escolares y la cultura del centro.
Entrevistas semiestructuradas, a los docentes. Estas entrevistas sern grabadas en
audio para su posterior digitalizacin.
Cuestionarios abiertos dirigidos a los docentes del centro, sobre diferentes aspectos
relacionados con el centro.
Grupos de discusin, en los cuales las familias y estudiantes darn informacin de los
docentes.
Anlisis de documentos clave: Proyecto educativo, plan de convivencia, reglamento de
rgimen interno y proyectos de innovacin existentes.
Respecto al proceso de anlisis cualitativo ce los datos; la primera aproximacin a los
datos se realizo de forma inductiva a partir del discurso e informacin obtenida a travs de
los participantes. Las categoras generadas han permitido en anlisis total de los datos. El
proceso seguido ha seguido las fases siguientes:
Elaboracin de sistemas de categoras que nos permitan analizar los datos obtenidos.
Aplicacin de la categorizacin a la totalidad de los instrumentos y estrategias.
Realizacin de un anlisis comparativo entre los diferentes docentes.
Para el anlisis de los datos se ha utilizado el software ATLAS.ti; creando durante
todo el proceso de investigacin un clima de rapport que favorezca la triangulacin de los
datos.
Resultados
La realizacin del trabajo de campo mediante las entrevistas al equipo directivo,
docentes de diferentes departamentos, jefes de departamento y miembros del equipo de
orientacin, as como familias y estudiantes, han aportado como resultados las diferentes
estrategias y metodologas de atencin a la diversidad y compensacin educativa que se
utilizan en el IES Madrid Sur para poder ofrecer a todos los alumnos la mejor educacin
posible.
La visin de las profesionales del centro educativo coinciden en que las prcticas,
medidas e iniciativas que se llevan a cabo en el centro son un elemento definitorio esencial
978-84-695-8363-0
206
del centro, gracias al cual se consigue dar respuesta a todos los alumnos del centro,
favoreciendo su aprendizaje y su implicacin en la vida del centro.
Entre estas prcticas y metodologas didcticas destacan:
978-84-695-8363-0
207
978-84-695-8363-0
208
978-84-695-8363-0
209
Ayers, W. (1993). To teach: The journey of a teacher. Nueva York: Teachers College Press.
Kohl, H. (2004). Teaching for social justice. En K. D. Salas, R. Tenorio, S. Walters, y D.
Weiss, The new teacher book: Finding purpose, balance, and hope during your first
years in the classroom (pp. 42-44). Milwaukee, WI: Rethinking Schools.
Maras, J. (1974). La justicia social y otras justicias. Madrid: Seminarios y Ediciones.
McDonald, M. (2005). The integration of social justice in teacher education. Journal of
Teacher Education, 56(5), 418-435.
Nieto, S. (2003). What keeps teachers going? Nueva York: Teachers College Press.
Simmons, D. C., y Kameenui, E. J. (Eds.) (1998). What reading research tells us about
children with diverse learning needs. Mahwah, NJ: Lawrence Erlbaum Associates, Inc.
Slavin, R.E. (1989). School and classroom organization. Mahwah, NJ: Lawrence Erlbaum
Associates, Inc.
Swindler, G. (2008). Beyond the illusion of diversity: How early childhood teachers can
promote social justice. Washington: Heldref Publications.
Tomlinson, J. (1995). Professional development and control: The role of the General
Teaching Council. Journal of Education for Teaching, 21(1), 5968.
Vavrus, M. (2002). Transforming the multicultural education of teachers. Nueva York:
Teachers College Press.
Young, I. M. (1990). Justice and the politics of difference. Princeton, NJ: Princeton
University Press.
978-84-695-8363-0
210
Resumen
El estudio pretende conocer la importancia, uso y utilidad que el profesorado de segundo y
tercer ciclo de educacin primaria otorga a un conjunto de estrategias para la enseanza de
la comprensin lectora. Para ello se elabora la Escala de Evaluacin de la Enseanza de
Conocimientos y Habilidades para la Comprensin Lectora consiguiendo un satisfactorio
ndice de validez de criterio y alta fiabilidad. La muestra la componen 95 profesores (47 de
2 ciclo y 48 de 3 ciclo). Analizados los resultados, se comprueba que la mayora del
profesorado concede una gran importancia a las estrategias, aunque no le sigue tal alto su
uso y utilidad percibida. Especialmente valorados en importancia, uso y utilidad los
conocimientos relacionados con estrategias lectoras y caractersticas del texto, por encima
que las referidas al control, evaluacin y correccin de la comprensin lectora. Se
encuentran diferencias significativas en el uso de un reducido nmero de estrategias a favor
del profesorado de tercer ciclo. Del estudio se desprende que se promociona un
conocimiento metalector parcial.
Descriptores: Conocimiento metalectores; comprensin lectora; habilidades lectoras;
estrategia lectora.
Abstract
The study tries to know the importance, use and usefulness that the professorship of the
second and third cycle of primary education grants to a set of strategies for the education of
the reading comprehension. For it there is elaborated the Scale of Evaluation of the
Education of Knowledge and Skills for the Reading Comprehension obtaining a satisfactory
index of validity of criterion and high reliability. The sample is composed by 95 teachers (47
of 2 cycle and 48 of 3 cycle). Analyzed the results, there is verified that the majority of the
professorship grants a great importance to the strategies, though such a high place does not
follow his use and perceived usefulness. Specially valued for importance, use and usefulness
the knowledge related to strategies reading and typical of the text, above that recounted to the
control, evaluation and correction of the reading comprehension. They find significant
differences in the use of a limited number of strategies in favour of the professorship of the
third cycle. Of the study it is clear that a knowledge improves itself metareader partially.
Keywords: Knowledge metareaders; reading comprehension; reading skills; reading
strategy.
978-84-695-8363-0
211
Introduccin
Sin menospreciar el incalculable impacto que las nuevas tecnologas de informacin
tienen y tendrn en la generacin y divulgacin del conocimiento humano, preciso es
reconocer que la lectura sigue siendo sin duda una de las actividades ms frecuentes,
necesarias y presentes, tanto en la vida escolar como en lo que a la participacin activa en una
comunidad alfabetizada como la nuestra se refiere.
La lectura, como seala Alonso (2005), es principalmente una actividad motivada, lo
cual significa que de un modo u otro se lee con un propsito. Siendo la enseanza de
habilidades relacionadas con el control y la supervisin de la comprensin lectora un
cometido que requiere intervenciones largas, sistemticas y especficas (Mateos, 1991), no
parece que esta sea algo prioritario en nuestras escuelas.
Lectura y comprensin lectora
De un tiempo a esta parte se ha abierto camino un modelo explicativo del proceso
lector en el que cobra un especial protagonismo la construccin del significado como fruto de
la interaccin entre el lector y el texto. Del carcter interactivo de la lectura sobreviene la
comprensin lectora del texto como una representacin mental de su significado (Burn,
1996). Y en este punto la nueva informacin se integra con los conocimientos previos del
lector, enriquecindolos o modificndolos (Sol, 1992).
Llegados a este punto hay que ocuparse de cmo y cundo se ensean las estrategias
de comprensin lectora as como del papel que ocupa el profesor. Numerosos autores apuntan
que la enseanza de la comprensin lectora se tiene que insertar en las dinmicas habituales
de clase y dentro de su organizacin por asignaturas (Burn, 1996)
La revisin anterior pone de relieve que la lectura es una actividad compleja,
multifactorial y motivada, de modo que el alumno, segn el modelo interactivo, ocupa un
lugar protagonista en lo que a la comprensin y al acceso de los significados se refiere. Mayor
(1993) lo resume afirmando que frente a todo aprendizaje los aprendices son participantes
activos en su propio proceso de aprendizaje. En este punto cobra una especial relevancia la
idea del conocimiento sobre la gestin, control y regulacin del propio proceso lector,
tambin denominada metalectura
La teora metacognitiva y la metalectura
Una de las primeras y ms influyentes teoras acerca de la metacognicin fue la
desarrollada por Flavell en la dcada de los aos 80 (Mayor, 1993). Y es en la dcada de los
80 cuando Brown propone la aplicacin del concepto de metacognicin a la lectura
(Peronard, 2005), con relacin al conocimiento referido a la tarea de leer, los textos y las
estrategias.
El conocimiento y las habilidades metacognitivas aumentan con la edad si bien los
ambientes educativos y la accin instructiva del profesorado producen mejoras sobre el
conocimiento y las habilidades metacognitivas, principalmente cuando los programas de
instruccin estn contextualizados en las prcticas curriculares del aula (Carriedo, 1994).
978-84-695-8363-0
212
Son numerosas las investigaciones que informan sobre las modificaciones de los
conocimientos metacognitivos como efecto de la metodologa con que el profesor desarrolla
su instruccin sobre estrategias, control y otros procesos cognitivos (Mayor, 1993).
La presente investigacin se centra en la figura del profesor como mediador
responsable de un buen nmero de aprendizajes. Cualificado para la enseanza de reas
concretas del conocimiento, es tambin labor y cometido la enseanza de estrategias y modos
efectivos y eficaces de aprender.
El amplio panorama de investigaciones que describe con profundidad el proceso lector
y la comprensin lectora se enriquece fruto de su interseccin con los presupuestos
metacognitivos. Es en este contexto donde cobra sentido y valor el presente estudio siendo sus
objetivos principales:
1) Conocer el grado en que el profesorado de Educacin Primaria valora, para la enseanza
de la comprensin lectora, determinadas estrategias que desarrollan el conocimiento
metacognitivo, en trminos de:
a) Grado de importancia.
b) Uso.
c) Utilidad percibida.
2) Analizar si existen diferencias significativas en la valoracin que el profesorado realiza de
estas estrategias, en funcin de su adscripcin a 2 o 3 ciclo de Educacin Primaria.
Mtodo
Enfoque y tipo de investigacin
Estudio de carcter cuantitativo, no experimental, descriptivo y con diseo mediante
encuesta (Hernndez et al, 2003).
Contexto y participantes
Participaron en el estudio un nutrido grupo de profesores (N = 95) de un total de
catorce centros educativos (once pblicos y tres concertados). Trece de estos centros se
ubican en tres localidades de la comarca del Bajo Vinalop y uno en la ciudad de Alicante.
Los centros en su conjunto atendan a una poblacin escolar aproximada de 5.590 (4.390 de
alumnos de educacin infantil y primaria y 1.200 alumnos de educacin secundaria y
bachillerato).
La poblacin de inters en la presente investigacin la integran prioritariamente los
profesores tutores de 2 y 3 ciclo de educacin primaria. Se facilitaron un total de 139
cuestionarios consiguiendo una participacin del 68%, quedando la muestra finalmente
constituida por 95 profesores (47 perteneciente al segundo ciclo, y 48 de tercer ciclo).
Por cursos los 95 profesores se distribuan de la siguiente forma: 23 adscritos a 3
curso de educacin primaria, 24 adscritos a 4, 24 adscritos a 5 y finalmente 24 adscritos 6
978-84-695-8363-0
213
curso. Las edades estaban comprendidas entre 22 y 60 aos (M = 42.43, DT = 11.25) donde
mas de la mitad (55%) son mayores de 40 aos.
Del profesorado que constitua la muestra, el 64% de los profesores eran mujeres y el
31% varones. Con una experiencia docente comprendida entre un 1 y 38 aos (M = 18.67, DT
= 11.59) hay que resaltar que 43% de los profesores de la muestra cuentan con ms de 20
aos de experiencia docente.
Variables e instrumentos
Las variables de inters en este estudio estn representadas por la valoracin que en
trminos de importancia, uso y utilidad da el profesorado a un conjunto de acciones y de
estrategias para la enseanza de la comprensin lectora.
El instrumento que se elabora es la Escala de Evaluacin de la Enseanza de
Conocimientos y Habilidades para la Comprensin Lectora. Esta escala consta de 24
acciones/estrategias instructivas realizadas por el profesor que guardan relacin con la
enseanza de la lectura y de la comprensin lectora. La escala recibe una valoracin en
funcin del grado de importancia, uso o utilidad percibida de cada una de las estrategias. El
sistema de valoracin empleado en los tres mbitos es una escala tipo Likert (1 = nada , 4 =
mucho en la apreciacin de importancia y utilidad, y 1 = nunca, 4 = siempre en la
apreciacin del uso).
Con objeto de seleccionar y redactar los tems que iban a formar parte del instrumento
se procedi a una revisin y anlisis de aquellos artculos de investigacin y manuales
especializados dedicados al estudio de la lectura, la comprensin lectora, con especial
atencin a la literatura de orientacin metacognitiva. As, se toman en consideracin un
conjunto de habilidades metacognitivas para la comprensin lectora, derivadas de la revisin
que lleva a cabo Mayor (1993) sobre aspectos coincidentes en diferentes programas de
entrenamiento en estrategias metacognitivas para la mejora de la comprensin lectora. La
redaccin definitiva de los tems se llev a cabo atendiendo criterios de claridad y concrecin
despus de distintos procesos de reformulacin y sntesis.
Fiabilidad y validez
La comprobacin de la validez de contenido se fundament en el juicio de expertos
actuando como tales 16 profesores con dilatada experiencia docente. Se calcul el ndice de
Validez de Contenido (IVC) segn procedimiento propuesto por Lawshe. Para la valoracin
de los tems del instrumento se utiliz una escala tipo Likert (1 = absolutamente irrelevante, 4
= muy relevante). Finalmente se calcula el ndice de validez de contenido del total de la escala
una vez excluido el tem 3, arrojando un resultado satisfactorio de .67
Para contrastar la validez del constructo y la consistencia interna, las puntuaciones
directas asignadas a los tems se han sometido a un anlisis factorial exploratorio de
componentes principales (AFEC). Se ha realizado un AFEC para cada forma de con la que se
ha respondido la escala, atendiendo al grado de importancia, uso y utilidad percibida.
En la valoracin de las estrategias atendiendo a su grado de importancia, el test de
esfericidad de Barlett (2 = 1033.921, p = .000) y la medida de adecuacin muestral KMO
978-84-695-8363-0
214
(.775) son favorables para realizar el AFECP, que ofrece 6 autovalores mayores que la
unidad, siendo dominantes el primero y segundo (el 41% de la varianza explicada).
Dado que el anlisis factorial exploratorio no apoya la estructura de categoras
postulada tericamente se realiza un anlisis factorial adicional concretando en dos el nmero
de factores. En este segundo anlisis factorial los tems agrupados en dos factores s confieren
al instrumento una estructura de dos dimensiones que resulta satisfactoria: Estrategias
Lectoras y Caractersticas del Texto y Estrategias de Comprensin Lectora (la primera
explica el 231% de la varianza total y la segunda el 215%)
Para verificar la fiabilidad de la escala total se calcul el coeficiente alpha de
Cronbach como medida de consistencia interna, obtenindose unos satisfactorios coeficientes
de fiabilidad para los tres mbitos de valoracin, grado de importancia, uso y utilidad
percibida de .90, .88 y ,91. La fiabilidad de los factores en los tres mbitos de la escala, grado
de importancia, uso y utilidad percibida tambin es buena aunque sensiblemente inferior a la
total de la escala. El factor Estrategias Lectoras y Caractersticas del Texto tiene una
fiabilidad en los tres mbitos de .84, .77 y .88. Mientras que la fiabilidad del factor
Estrategias de Comprensin Lectora respecto a los tres mbitos de la escala es de .86, .86 y
.87.
Procedimiento
En todos los centros educativos se estableci un contacto previo con direccin
explicando los aspectos fundamentales del trabajo de investigacin y solicitando la
participacin de los tutores de 2 y 3 ciclo. Los cuestionarios se llevaban en mano y se
facilitaban segn el nmero de tutores de los cursos de 3, 4, 5 y 6 de Educacin Primaria.
Anlisis de datos
Todos los anlisis estadsticos fueron realizado con el programa informtico SPSS
versin 11.5 (McMillan y Schumacher, 2005). Se calcul el ndice de fiabilidad total de la
escala en las tres modalidades de valoracin de las estrategias, segn el grado de importancia,
uso y utilidad percibida. Se procedi tambin a calcular en los tres modos de valoracin de la
escala los ndices de fiabilidad por dimensin. En todos estos clculos se utiliz el
procedimiento corto. Para el anlisis factorial del instrumento se utilizo el procedimiento de
reduccin de datos incluido en el programa informtico SPSS.
Para el primer objetivo se calcularon los estadsticos descriptivos (media, desviacin
tpica, porcentajes y frecuencias) en las tres modalidades de la escala, grado de importancia,
uso y utilidad percibida. Atendiendo al segundo objetivo, se realizaron las comparaciones de
medias (prueba t) con el fin de averiguar la existencia o no de diferencias significativas en las
valoraciones que el profesorado realizo de las estrategias segn su pertenencia a segundo o
tercer ciclo.
978-84-695-8363-0
215
Resultados
Valoracin de las estrategias para la enseanza de la comprensin lectora
Estrategias Lectoras y Caractersticas del Texto
La estrategia explico que cuando se lee de manera comprensiva, se capta antes el
mensaje contenido en el texto el 96% del profesorado le otorga mucha importancia (M =
3,73, DT = ,53); se le da ms uso (M = 3,59, DT = ,61) 93 % del profesorado; y el 89%
profesorado le concede la mxima utilidad (M = 3,37, DT = ,66). Tambin en importancia,
uso y utilidad le sigue la estrategia explico que cuando se comprende aquello que se lee
aumenta nuestro conocimiento. Por el contrario, describo distintas formas de realizar una
lectura segn la familiaridad del texto, arroja el peor resultado en los tres mbitos.
Estrategias de Comprensin Lectora
La estrategia explico que lo importante es controlar la comprensin mientras se est
leyendo el 93% del profesorado le otorga mucha importancia (M = 3,49, DT = ,69); tiene un
mayor uso recibiendo la mxima valoracin por el 90% del profesorado (M = 3,32, DT = ,67);
mientras que el 87% percibe mucha utilidad (M = 3,22, DT = ,68). A esta estrategia le sigue
en importancia, uso y utilidad la estrategia justifico que realizar anotaciones, subrayar y
autointerrogarse son estrategias lectoras que facilitan la comprensin. La estrategia con peor
resultado es hago que mis alumnos se formulen y respondan la pregunta tal y como estoy
leyendo, conseguir el objetivo propuesto para esta actividad de lectura?
Diferencias en funcin del ciclo
Estrategias Lectoras y Caractersticas del Texto
Se hallan diferencias significativas en la valoracin que realiza el profesorado de
tercer ciclo de la importancia de la estrategia demuestro que comprender un texto permite
relacionar los datos que forman parte del mismo y sobre la utilidad percibida en la estrategia
explico que al comprender un texto se pueden llegar a nuevas conclusiones sobre el tema
ledo.
Estrategias de Comprensin Lectora
Se encuentran diferencias estadsticamente significativas en el uso que hace el
profesorado de tercer ciclo de la estrategia justifico que realizar anotaciones, subrayar y
autointerrogarse son estrategias que facilitan la comprensin y de la estrategia ejemplifico
acciones concretas que favorecen el control de la actividad de leer.
Discusin
Los resultados de la investigacin aportan una visin panormica sobre el grado de
aceptacin de ciertas estrategias para la enseanza de la comprensin lectora, aceptacin que
sustenta y explica en parte, su uso y el valor de utilidad encontrado. Estos resultados pueden
servir de orientacin en la concrecin de planes de mejora especfica del profesorado en el
rea objeto de la investigacin. Queda demostrado, adems, que algunas de las estrategias que
consiguen mejor valoracin reclaman niveles inferiores de control metacognitivo. Y que
978-84-695-8363-0
216
978-84-695-8363-0
217
978-84-695-8363-0
218
Resumen
En el presente trabajo se pretende dar a conocer cul ser el papel que desempear la
Atencin a la Diversidad en la nueva Ley Orgnica para la Mejora de la Calidad Educativa
(LOMCE), la cual por ahora se halla en un estado de anteproyecto de ley. Hasta ahora se
han incluido una serie de modificaciones respecto a la estructura y organizacin del sistema
educativo. Estos cambios afectan especialmente a la atencin a la diversidad y a la
orientacin acadmica en las etapas de secundaria y de bachillerato. En esta revisin se han
comparado la legislacin actual Ley Orgnica de Educacin (LOE) con del borrador en el
que est trabajando el Ministerio. Se han analizado cules son los nuevos programas e
itinerarios que se ofertan para dar respuesta a las necesidades educativas de todo el
alumnado en cada etapa, primaria, secundaria y bachillerato.
Descriptores: Diversidad, Orientacin Acadmica, LOMCE, LOE.
Abstract
In the present work aims to show what role it will play the Attention to Diversity in the new
Organic Law for the Improvement of Educational Quality (LOMCE), which for now is in a
state bill. So far they have included a number of modifications to the structure and
organization of the education system. These changes particularly affect for Diversity and
Guidance Councelor stages of Secondary and Baccalaureate. In this review we have
compared the current legislation (LOE) with the drafts Ministry. We analyzed what new
programs and itineraries that are offered to meet the educational needs of all students at each
stage Elementary, Middle and High School.
Keywords: Diversity, Guidance Councelor, LOMCE, LOE.
Introduccin
Por diversidad en el mbito educativo, entendemos el conjunto de diferencias
individuales que coexisten en todo el alumnado. Es decir, que hablamos de la heterogeneidad
que existe en todas las aulas, debida a las diferencias en la capacidad intelectual, en el
rendimiento acadmico, diferencias en los intereses y en el ritmo de aprendizaje, diferencias
socio-culturales, lingsticas y diferencias de gnero. Es decir que todos somos diferentes.
Actualmente en los centros educativos existe una gran variedad de circunstancias
personales, sociales-econmicas y de salud que conviven a diario. Por tanto atencin a la
diversidad significa dar respuesta a todo ese alumnado, atendiendo a sus diferencias, no solo
978-84-695-8363-0
219
978-84-695-8363-0
220
Dnde estamos?
La Ley Orgnica de Educacin (LOE) ha sido una ley que ha querido atender a la
diversidad desde un enfoque educativo flexible, intentando dar respuesta al alumnado a travs
de distintos itinerarios educativos (Programas de Compensatoria, Programas de Cualificacion
Profesional Inicial, Programas de Diversificacin Curricular) y de otras estrategias
metodolgicas como las adaptaciones curriculares individuales y adaptaciones significativas
(ACI/ ACIS), programas de refuerzo o desdobles, etc.
Muchas de estas estrategias venan heredadas de la LOGSE 1990 y slo se ha variado
su nombre en algunos casos como los Programas de Garanta Social por Programas de
Cualificacion Profesional Inicial. En otras ocasiones han permanecido iguales como los
Programas de Diversificacin Curricular y las ACIS. Los Programas de Compensacin
Educativa han continuado para atender las necesidades individuales de desventaja social y/o
econmica, as como las necesidades de acceso al currculo del alumnado extranjero recin
llegado con desconocimiento de la lengua.
A dnde nos dirigimos? La atencin a la diversidad en la LOMCE
En la exposicin de motivos, en la ltima versin revisada del anteproyecto de ley, de
febrero de 2013, aparece lo que podra considerarse la primera mencin a la atencin a la
diversidad, () todo alumnado como el objeto de una atencin en la bsqueda de su propio
talento que la ley articular los mecanismos necesarios para la permeabilidad y retorno entre
las diferentes trayectorias y vas (). Adems se expresa que la calidad de la educacin ser
necesaria para conseguir la igualdad de oportunidades, haciendo hincapi adems en que el
sistema educativo sea integrador, inclusivo y exigente.
La primera ocasin en la que se menciona de manera explcita en la nueva ley la
educacin inclusiva, es en el apartado V de la exposicin de motivos. Concretamente se hace
referencia a la Estrategia Europea sobre Discapacidad 2010-2020, aprobada en 2010 por la
Comisin Europea, en la que se recoge que esta mejora en los niveles de educacin debe
dirigirse tambin a las personas con discapacidad, a quienes se les habr de garantizar una
educacin y formacin inclusivas y de calidad en el marco de la iniciativa Juventud en
movimiento", planteada por la propia Estrategia Europea para un crecimiento inteligente. A
tal fin, se tomar como marco orientador y de referencia necesaria la Convencin
Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, adoptada por Naciones
Unidas en diciembre de 2006, vigente y plenamente aplicable en Espaa desde mayo de 2008.
Relacionado tambin con la atencin a la diversidad, se habla de la flexibilidad de las
trayectorias acadmicas para ayudar a cada estudiante a desarrollar todo su potencial
concretamente se habla del alumnado en la etapa de Secundaria, La flexibilizacin de las
trayectorias (), se concreta en el desarrollo de programas de mejora del aprendizaje y el
rendimiento en el segundo y el tercer curso de la Educacin Secundaria Obligatoria, la
anticipacin de los itinerarios hacia Bachillerato y Formacin Profesional, y la transformacin
del actual cuarto curso de la Educacin Secundaria Obligatoria en un curso fundamentalmente
propedutico y con dos trayectorias bien diferenciadas. Esta diversificacin permitir que el
estudiante reciba una atencin personalizada que se oriente hacia la va educativa que mejor
se adapte a sus necesidades ()
978-84-695-8363-0
221
978-84-695-8363-0
222
978-84-695-8363-0
223
materias diferentes a las establecidas con carcter general, con la finalidad de que los alumnos
puedan cursar el cuarto curso por la va ordinaria y obtengan el ttulo de graduado en
educacin secundaria obligatoria. Los alumnos que cursarn dichos Programas, sern aquellos
alumnos que hayan repetido al menos un curso en cualquier etapa, y que una vez cursado el
primer curso de educacin secundaria obligatoria no estn en condiciones de promocionar al
segundo curso, o que una vez cursado segundo curso no estn en condiciones de promocionar
a tercero. El equipo docente podr proponer a los padres o tutores legales la incorporacin a
un programa de mejora del aprendizaje en segundo y tercero en el primer supuesto, o slo en
tercer curso en el segundo supuesto.
De manera explcita se menciona al alumnado con dificultades de aprendizaje: Estos
programas irn dirigidos preferentemente a aquellos alumnos que presenten dificultades
relevantes de aprendizaje no imputables a falta de estudio o esfuerzo. Las Administraciones
educativas garantizarn al alumnado con discapacidad que participe en estos programas la
disposicin de los recursos de apoyo que, con carcter general, se prevean para este alumnado
en el sistema educativo espaol.
En el apartado dedicado a la evaluacin y promocin de curso no aparecen novedades,
se mantiene los criterios actuales y se recuperan de legislaciones anteriores la consideracin
de grupo de instrumentales, las lenguas (castellana y cooficial) y las matemticas, es decir,
para promocionar de curso no se puede suspender simultneamente dos de estas materias. As
mismo, se mantiene que los alumnos que promocionen sin haber superado todas las materias
seguirn programas de refuerzo que establezca el equipo docente y debern superar las
evaluaciones correspondientes. Como hasta ahora, el alumno podr repetir el mismo curso
una sola vez y dos veces como mximo dentro de la etapa, y cuando se produzca una segunda
repeticin en tercero o cuarto curso, entonces se prolongar un ao el lmite de edad. De igual
manera permanece la excepcionalidad de una repeticin por una segunda vez en cuarto curso
si no ha repetido anteriormente en secundaria. En las repeticiones se sigue teniendo en cuenta
que las condiciones curriculares se adapten a las necesidades del alumno para que supere las
dificultades detectadas. Para facilitar que el alumnado consiga los objetivos y adquiera las
competencias correspondientes, las Administraciones educativas establecern medidas de
refuerzo educativo, con especial atencin a las necesidades especficas de apoyo educativo.
Otra diferencia en cuanto a la legislacin anterior, se centra en el consejo orientador,
ste no se prev al final de la etapa de secundaria, sino al finalizar cada uno de los cursos. Se
entregar a los padres o tutores legales de cada alumno un consejo orientador, que incluir un
informe sobre el grado de logro de los objetivos y competencias, y adems en l se propondr
a la familia un itinerario adecuado a sus necesidades, como la incorporacin a un programa de
mejora del aprendizaje y el rendimiento o a un ciclo de formacin profesional bsica. El ttulo
de graduado en educacin secundaria obligatoria se obtendr cuando se superen la
evaluacin final y adems se obtenga una calificacin final de educacin secundaria
obligatoria igual o superior a 5 sobre 10.
Diferencias en la etapa de bachillerato
Las modalidades de bachillerato permanecen como hasta ahora, los itinerarios
acadmicos son: Ciencias sociales, Humanidades, Ciencias y Artes. Al igual que en las etapas
anteriores el currculo se organizar en materias troncales, especficas y materias de libre
configuracin autonmica. Tambin en Bachillerato se tienen en cuenta las mismas medidas
978-84-695-8363-0
224
978-84-695-8363-0
225
Resumen
La accin ambiental debe dirigirse hacia la mejora de las relaciones ecolgicas, y por tanto,
a las relaciones que surgen entre las personas con otras personas y dems seres vivos. As,
cualquier actuacin que se desarrolle desde la Educacin Ambiental debe atender a la
diversidad con el objeto de favorecer la convivencia en el planeta a favor de la calidad de
vida de todos los seres vivos. Debido al impacto que ha tenido el programa internacional
Ecoescuelas en los centros escolares andaluces, se realiz un estudio con el objetivo de
identificar cmo desarrollan la diversidad en sus centros escolares los coordinadores del
programa Red Andaluza de Ecoescuelas. Se analizaron 21 entrevistas, cuyos resultados
indican que la diversidad es uno de los aspectos ms relevantes para los docentes, la cual es
desarrollada a travs de la diversidad cultural, el comercio justo, el mercadillo solidario, la
diversidad biolgica y geogrfica o la calidad ambiental.
Descriptores: Educacin Ambiental, ecoescuelas, docentes, escuela, diversidad.
Abstract
Environmental action should be directed towards improving the ecological relationships, and
therefore, to the relationships that arise between people with each other and other living
things. Thus, any action developed from the Environmental Education should address
diversity in order to encourage coexistence in the world for the quality of life for all living
beings. By the impact of the International Eco-Schools program in schools of Andalusia, in
order to identify how to develop the educational diversity into the Andalusian Network of
Eco-Schools program a study was conducted. Twenty one interviews were developed, the
results indicate diversity is one of the most important dimension for teachers. This diversity is
developed through cultural elements, fair trade, the charity market, biodiversity and
geographic diversity and the environmental quality.
Keywords: Environmental Education, Eco-Schools, Teachers, School, Diversity.
Introduccin
En 1975, la UNESCO anunci que la accin ambiental debe ir dirigida a la mejora de
las relaciones ecolgicas (UNESCO, 1977a, 1977b, 1978). Se considera tanto las relaciones
que surgen entre las personas con los dems seres vivos como las interrelaciones que existen
entre los seres humanos. Posteriormente, las Naciones Unidas declar el decenio 2005-2014
como Dcada de la Educacin para el Desarrollo Sostenible, la cual abarca contenidos muy
978-84-695-8363-0
226
diversos que hacen desde la Educacin Ambiental (EA) se desarrolle la educacin para la paz,
la salud, el consumo responsable, la interculturalidad, la equidad, etc. (Gutirrez, Benayas y
Calvo, 2006; Macedo y Salgado, 2007; Novo, 2009). Recientemente, en la Cumbre Ro+20
celebrada en junio de 2012, se reforz la idea de dirigir el Desarrollo Sostenible (DS) hacia:
() crecimiento sostenido, inclusivo y equitativo, creando mayores
oportunidades para todos, reduciendo las desigualdades, mejorando los niveles
de vida bsicos, fomentando el desarrollo social equitativo y la inclusin, y
promoviendo una ordenacin integrada y sostenible de los recursos naturales y
los ecosistemas que preste apoyo, entre otras cosas, al desarrollo econmico,
social y humano, (). (ONU, 2012, p. 1).
As, cualquier actuacin que se desarrolle desde la EA ha de atender a la diversidad
con el objeto de favorecer la convivencia en el planeta a favor de la calidad de vida de todos
los seres vivos. La diversidad hace referencia a la diversidad de ecosistemas, la biodiversidad,
la diversidad social, la diversidad cultural, diversidad econmica, etc. (Mckeown, Hopkins,
Rizzi y Chrystallbridge, 2002). Diversidad que precisa de la buena convivencia entre los seres
que estn relacionndose directa o indirectamente, que favorecer en los educandos la
comprensin y les impulse a promover la equidad, la justicia social, la paz, los procesos
democrticos o la proteccin del ambiente. Concluyendo, la Educacin para el Desarrollo
Sostenible atiende a la diversidad biolgica y a la cultural (Gil, Vilches, Toscano y Macas,
2006; Gutirrez, Benayas y Calvo, 2006; Vega y lvarez, 2005; Vilches y Gil, 2012).
En el caso del profesorado que se encuentran en los centros escolares son
profesionales que as lo consideran. Y su labor docente no se cie al simple desarrollo
curricular dentro del aula, siendo tambin, partcipes en diversos programas educativos que
les permite continuar y complementar su actividad escolar. La diversidad la pueden
desarrollar a travs de la convivencia, la solidaridad, la educacin en valores, la cultura, el
respeto, la coeducacin, etc. Conceptos que el Programa Ecoescuelas en las escuelas
desarrolla al realizar diversas actividades con toda la comunidad escolar, e incluso con
agentes externos al centro que participan debido a su experiencia en la temtica.
La meta que se plantea en Ecoescuelas es desarrollar principalmente en el alumnado,
competencias que les permita conocer e interactuar con el mundo fsico, competencia social y
ciudadana, as como para aprender a aprender a lo largo de la vida, de manera autnoma y con
iniciativa personal. Para ello, el programa Ecoescuelas propone tres temticas principales que
son el agua, la energa y los residuos, y como secundarias otras no incluidas, como son la
biodiversidad, el consumo responsable o el comercio justo. En el caso Andaluz, las temticas
generales son cuatro, al agregar a las tres anteriores la temtica de entorno fsico y humano,
en la cual se tratan los aspectos o problemas de las personas consigo misma o de stas con
otras personas. Sin embargo, cualquier situacin de aprendizaje es una situacin propicia de
aprendizaje sobre la diversidad y se puede relacionar en todas las temticas.
A continuacin se expondr un estudio que es parte de una investigacin ms amplia
sobre el programa Ecoescuelas en la Comunidad Andaluza. El objetivo para la presente
investigacin es identificar cmo desarrollan la diversidad en sus centros escolares los
coordinadores del programa Red Andaluza de Ecoescuelas.
978-84-695-8363-0
227
Mtodo
Se sigui un diseo de encuesta, cuyo instrumento utilizado para la recogida de
informacin fue una entrevista estructurada const de tres dimensiones: 1) temticas que se
abordan en el centro escolar con el programa Ecoescuelas, 2) actividades que se realizan en el
centro con el programa Ecoescuelas, 3) participantes en el programa Ecoescuelas.
Se seleccionaron 16 centros escolares de los 127 que participaron en el programa
Ecoescuelas durante el curso 2010/2011, en cuyo muestreo por cuotas se definieron los
estratos de la poblacin teniendo en cuenta las ocho provincias andaluzas y los tipos de
centros educativos (las opciones fueron colegio e instituto). Debido a la importancia de la
informacin que podan proporcionar, se sumaron tres centros educativos, ms las dos
Secretaras Educativas que dinamizan las Ecoescuelas andaluzas, obteniendo as un tamao
muestral de 21 centros educativos.
Se desplaz hasta los centros escolares distribuidos en Andaluca para realizar las
entrevistas. Previamente, se inform de la investigacin a la coordinadora de Ecoescuelas en
la Junta de Andaluca. Antes de acudir al centro se solicitaba su participacin a los
coordinadores de los respectivos centros.
Se utiliz el programa Atlas.ti versin 7 para la realizacin del anlisis de contenido
de las entrevistas transcritas, que permiti realizar la categorizacin de la informacin a partir
de un sistema de categoras emergentes.
Resultados
Los docentes que participan en el programa Ecoescuelas desarrollan la diversidad
dentro de la EA a travs de diversas actividades que se pueden organizar en las siguientes
categoras emergentes, a las cuales se han llegado despus de analizar los datos: diversidad
cultural, el comercio justo, el mercadillo solidario, la diversidad biolgica y geogrfica, y la
calidad ambiental (consultar Ilustracin 1).
978-84-695-8363-0
228
978-84-695-8363-0
229
978-84-695-8363-0
230
978-84-695-8363-0
231
Entre las mejoras de infraestructura del centro se encuentran cuartos de bao que estn
decorados con diversos colores para que no se asocie al gnero y aludiendo a motivos
naturales (por ejemplo, el servicio de las chicas est adornado con un campo verde). Tambin
el acondicionamiento de zonas comunes con alusin a motivos naturales o de respeto a lo/s
dems, permiten sumergirse a la comunidad escolar en la naturaleza, al colocar plantas,
mensajes de buenas conductas, murales decorativos sobre la convivencia, etc. Adaptacin de
zonas comunes que permiten desarrollar hbitos ambientales, como son los aparcamientos de
bicicletas, un huerto ecolgico, o los itinerarios botnicos y geolgicos autctonos.
Las mejoras en las relaciones intra e interpersonales (actitudes de respeto), se centran
en las relaciones que se producen entre las personas. Entre ellas, se encuentra la reduccin de
ruidos en el centro, la mejora de los hbitos alimenticios (por ejemplo, seguir la dieta
mediterrnea o aumentar el consumo de frutas y verduras), as como la prevencin o
disminucin del consumo de tabaco.
Discusin
La diversidad en EA es un concepto ms amplio de lo que en un principio las personas
pueden tener, puesto que la diversidad hace referencia a la variedad de relaciones que surgen
en cualquier situacin. Sin embargo, no toda relacin se trata dentro de la EA. Es por ello, los
centros que participan en el programa Ecoescuelas, abordan durante su labor educativa una
serie de actividades que tienen relacin con la diversidad cultural ambiental, la diversidad
biolgica y geogrfica, el comercio justo y la calidad ambiental.
As, el comercio justo engloba todo aquello que promueva el desarrollo sostenible en
pases donde los derechos y la igualdad de calidad de vida de los trabajadores son precarios.
Se pretende favorecer un nuevo orden econmico ms justo y solidario. Concienciar sobre el
desarrollo humano sostenible para mejorar las condiciones de pases que se encuentran en
desarrollo. Un instrumento que sirve de gua en la actualidad es el conocido ndice de
Desarrollo Humano, cuyo informe encargado por la UNESCO para el 2013, indica que entre
las reas sobre las que se debe enfocar el desarrollo es en la mejora de la igualdad. Y uno de
los aspectos que indica que hay que superar son las amenazas ambientales (Malik, 2013), que
si bien algunas no dependen del ser humano, otras se pueden evitar al construir en zonas no
recomendables para ello. De ah la relevancia del conocimiento de la diversidad geogrfica,
cuyos impactos de la actividad humana puede evitar catstrofes.
Todo ello, buscando una mejora de calidad ambiental por medio de la participacin
activa, ya sea mejoran las infraestructuras del centro escolar o las relaciones inter e
intrapersonales. Sin embargo, no slo se ha de abordar el entorno humano y el fsico, tambin
el entorno biolgico, cuya diversidad ha variado a causa de las acciones del ser humano que
ha introducido nuevas especies y se ha despreocupado por la conservacin de especies
autctonas que se desarrollan con mayor facilidad en el contexto andaluz. Siempre bajo el
enfoque de respetar las relaciones con los animales y las plantas.
Finalmente, las costumbres desaparecidas que favorecen el cuidado del ambiente se
han de recuperar y fomentar las actuales, las cuales se complementan con la cultura andaluza
desde su perspectiva ms artstica o social, como es el flamenco. Cultura que mantiene
tradiciones a favor del ambiente, y que son tiles como recursos educativos ambientales.
978-84-695-8363-0
232
978-84-695-8363-0
233
978-84-695-8363-0
234
Resumen
Dados los recientes cambios introducidos en los servicios de empleo de nuestro pas, que han
llevado a regularizar la colaboracin entre los Servicios Pblicos de Empleo y las
denominadas Agencias Privadas de Colocacin, este estudio pretende indagar en las
opiniones, conocimientos y actitudes existentes en torno a dichas agencias. As, se ha
realizado un estudio descriptivo tipo encuesta (n=115) a fin de identificar qu se sabe y opina
respecto a las Agencias de Colocacin con nimo de lucro. Tras la aplicacin de un
cuestionario construido ad hoc, a una muestra de 115 sujetos desempleados y empleados, se
ha encontrado que existe la creencia generalizada de que los Servicios Pblicos de Empleo
en Espaa no funcionan. Sin embargo, los encuestados opinan que las Agencias de
Colocacin con nimo de lucro son ms giles a la hora de facilitar un puesto de trabajo. A
modo de conclusin, destacamos que, entre las personas en desempleo y en particular en el
colectivo de mujeres, se empieza a ser consciente de que la orientacin profesional es muy
necesaria incluso cuando se tiene un empleo, como medio para prevenir y aprender a actuar
sobre los efectos negativos que pueden causar en las personas las posibles transiciones
laborales.
Descriptores: Orientacin profesional, Servicios pblicos de empleo, Agencias de
colocacin, Situacin laboral, Desempleo.
Abstract
Spain is making reforms in the employment services as a way to deal with the unemployment
problem that the country is suffering. As a result, new ways of collaboration between Public
Employment Services and Private Outplacement Agencies have been established. This study
aims to explore people's views, knowledge and attitudes about these agencies. Thus, a survey
(n=115) has been carried out to identify what it is known and believed about private
outplacement in Spain. After applying a questionnaire to 115 unemployed and employed
people, the study found that there is a general assumption among participants regarding the
uselessness of the Public Employment Services. However, the survey respondents believe that
private outplacement agencies are more agile for job searching. Results also show that
unemployed people in general, and particularly women, are increasingly aware that
professional or career guidance is needed, even for employed people, as a way to prevent and
learn how to tackle the negative effects that work transitions might have in peoples lives.
Keywords: Career counseling, Career guidance, Public employment services, Outplacement
agencies, Employment status.
978-84-695-8363-0
235
Introduccin
La destruccin de empleo que en los ltimos aos est experimentando nuestro pas
est generando una clara alarma social, convirtindose en la primera preocupacin de los
espaoles muy por delante de otros aspectos (Calvo y Rodrguez-Piero, 2011). Ms all de
las consecuencias econmicas de esta situacin, el trabajo est relacionado con el bienestar y
el desempleo con el malestar, pues no trabajar tambin perjudica a las personas en el plano
psicosocial (Prez, 1996). As, segn algunos estudios, quienes se encuentran empleados hoy
da experimentan una enorme satisfaccin por el mero hecho de trabajar (Blanch, Espuny,
Galn y Martn, 2003), mientras que las personas paradas estn menos satisfechas, tanto desde
la perspectiva general, como con su situacin actual y con su trayectoria profesional (PadillaCarmona, 2001b). Por tanto, el desempleo es un problema socioeconmico que afecta tanto a
las posibilidades de supervivencia y dignidad humana de cada ciudadano de forma individual,
como a la cohesin social, por sus dimensiones ticas, culturales, as como por sus
repercusiones en los flujos migratorios (Osuna, Vlez y Arcos, 2007). Es decir, el desempleo
afecta de manera holstica a la ciudadana.
En cuanto al trabajo, es comnmente conocido que al contrario que hace unas dcadas
cuando era posible y habitual desempear la misma ocupacin durante toda la vida, en la
actualidad, las personas se ven obligadas a cambiar de empleo de forma frecuente (PadillaCarmona, 2001b). Es decir, la idea de un trabajo para toda la vida est obsoleta. Por tanto, se
comprende que con independencia del deseo habitual de la mayora de las personas en la
adultez de estabilizar su situacin laboral, la realidad es que es necesario acostumbrarse a
pasar peridicamente por distintas situaciones en el empleo.
Ante el panorama de destruccin de empleo, del forzoso paso de los trabajadores y
trabajadoras por diferentes situaciones laborales y de las consecuencias que todo ello
conlleva, se hace evidente la necesidad de que las polticas pblicas pongan en marcha
mecanismos que ayuden a paliar el problema. En esta lnea, las nuevas y sucesivas
modificaciones legislativas pretenden situar a los servicios de empleo entre los mejores
intermediarios laborales, respondiendo mejor a las empresas ante sus demandas de trabajo y
aumentando la eficacia de las polticas de empleo en la mejora de la empleabilidad y las
posibilidades de insercin de las personas sin trabajo (RDL 3/2011 de 14/11, por el que se
aprueba el texto refundido de la Ley de Contratos del Sector Pblico). Hasta ahora se han
encargado de tales funciones los Servicios Pblicos de Empleo (en adelante, SPE), siendo
conocido el escaso impacto de los mismos en cuanto a la intermediacin laboral, como se
reconoce en el prembulo de la ltima reforma laboral: los SPE se han mostrado
insuficientes en la gestin de la colocacin, con unas tasas de penetracin muy escasas dentro
del total de colocaciones (Prembulo II Ley 3/2012 de 6/7, de medidas urgentes para la
reforma del mercado laboral). Esto ha llevado al cuestionamiento de su utilidad adems de a
constantes reformas del sistema de intermediacin laboral, y ha acabado justificando la
introduccin de las Agencias de Colocacin con nimo de lucro (en adelante, ACL) como
agentes de intermediacin laboral en nuestro pas.
Consideramos oportuno plantear si estas agencias pueden desempear un papel
relevante en la mejora de la insercin laboral como concepto ms amplio que el de la
intermediacin. Por su reciente aparicin en Espaa, no existen estudios que aporten luz sobre
tal cuestin. Creemos que especialmente interesa conocer cmo las percibe la ciudadana, es
decir, qu conocimientos y opiniones sobre ellas y sobre las posibles aportaciones que puedan
978-84-695-8363-0
236
hacer en cuanto a la mejora de la insercin laboral, que realizan los SPE, tienen los
potenciales usuarios de estas agencias.
Antecedentes
La actual regulacin en cuestiones de colocacin y empleo en Espaa (Ley de Empleo
de 2003) viene precedida por una trayectoria que comienzan en 1917 con la creacin de la
oficina central de colocacin15. En el recorrido hasta llegar a la actual situacin cabra
destacar las Leyes de Colocacin Obrera de 1931, la creacin en 1978 del INEM16, la Ley
Bsica de Empleo y el Estatuto de los Trabajadores, ambas de 1980 y la Ley 10/1994 de 19 de
mayo de Medidas Urgentes de Fomento de la Ocupacin, que legaliz las agencias privadas
de colocacin sin fines lucrativos y reconoci a las ETT17, rompiendo el monopolio pblico
estatal en materia de intermediacin desempeado por el INEM. Dando todo ello lugar a la
actual LE de 2003, y a sus continuas modificaciones para la reforma del mercado de trabajo,
tales como la Ley 35/2010 de 17-09 y la Ley 3/2012 de 06-07 que han introducido, entre otras
novedades, a las ACL como agentes de intermediacin laboral en nuestro pas.
El concepto de colocacin. Hecho vs. proceso
Cuando se dice que los SPE realizan pocas colocaciones en comparacin con otros
intermediarios laborales (Prez de los Cobos, 2010), entendemos que se hace referencia al
hecho de conseguir un contrato entre un demandante y un oferente de empleo. Sin embargo,
la actuacin de los SPE no se agota con la simple casacin entre ofertas y demandas de
empleo, la cual quedara encuadrada en la estricta intermediacin laboral (Monereo et al.,
2011), sino que incluye adems otras acciones dirigidas a hacer posible la insercin de los
trabajadores en el mercado de trabajo, tales como la orientacin profesional, los programas de
insercin laboral, el asesoramiento prestado a empresas, el fomento del autoempleo, etc. Es
cierto que todas estas acciones tienen como fin del procedimiento instalar a los individuos en
una situacin de empleo. Sin embargo, dicho hecho no define a la colocacin para todos los
autores consultados, existiendo algunos que la interpretan como proceso (Salas, 2010) y
consideran que la accin de terciar el acuerdo entre demandantes y oferentes de empleo es
estrictamente una intermediacin. Otros autores, como Sobrino (2011), van ms all y
excluyen a la intermediacin del proceso de colocacin, manifestando que el segundo no tiene
por qu vincular a una oferta y una demanda de empleo, sino que debe centrarse en la persona
y en su desarrollo.
De acuerdo con Sobrino (2011), opinamos que la colocacin otorga ms importancia
al trabajador que la intermediacin. Muestra de ello es que la primera engloba al autoempleo,
donde claramente queda ausente el servicio a la demanda de trabajo. En cambio, la
intermediacin por lo general satisface las necesidades tanto de demandantes como de
oferentes de empleo. Sin embargo, no por ello excluimos a la estricta intermediacin de las
acciones que componen a la colocacin. Entendemos que la colocacin del trabajador supone
una visin ms amplia que la de intermediacin, debiendo ser esta ltima parte del proceso de
colocacin cuando sea necesario. Por ello, nos parece un error afirmar que los SPE realizan
ms o menos colocaciones refirindose al nmero de personas que consigue empleo a travs
del contacto que los mismos proporcionan con demandantes de trabajo.
15
978-84-695-8363-0
237
18
19
978-84-695-8363-0
238
978-84-695-8363-0
239
Frecuencia
37
36
34
Porcentaje
34.5%
33.7%
31,8%
Instrumento
Para la recogida de datos se cre el cuestionario Conocimientos y Opiniones sobre las
Agencias de Colocacin, en cuya validacin facial participaron un conjunto de siete expertos
en los mbitos de orientacin profesional y diseo de instrumentos. Dicha herramienta est
compuesta por una tabla inicial de preguntas sociodemogrficas seguida de 37 tems
especficos sobre la informacin que desebamos obtener de acuerdo con los objetivos de la
investigacin, de los cuales la mayora son preguntas cerradas de valoracin con escalas
Likert, graduadas numricamente con 4 puntos (donde 3 es mucho, 2 lo preciso, 1 poco y 0
nada). Otras preguntas son dicotmicas con dos opciones opuestas o abiertas, en las que
preguntamos fundamentalmente el motivo de alguna respuesta anterior, dejando al encuestado
responder con sus propias palabras y expresiones. Para finalizar, el tem 37 se propuso como
tem abierto en el que pudiesen manifestar cualquier opinin adicional no reflejada en el resto
de cuestiones.
Procedimiento
El anlisis es de tipo estadstico, utilizndose estadsticos descriptivos, concretamente
medias, desviaciones tpicas y porcentajes. Para la realizacin de contrastes entre los grupos
se aplic, en primer lugar, la prueba de Kolmogorov-Smirnov a fin de conocer si la
distribucin de las variables se ajustaba al modelo normal. Dado que los resultados de esta
prueba no mostraban normalidad de las distribuciones, para identificar diferencias en cuanto a
la situacin laboral de los participantes se realiz, en primer lugar, la prueba Kruskal-Wallis
(KW ST) para los tres grupos mostrados en la Tabla 1, y posteriormente se realiz el
contraste Mann-Whitney (MW ST) para grupos de empleados y desempleados. En tercer
lugar, para identificar diferencias dependiendo del sexo, se realiz nuevamente el contraste
Mann-Whitney (MW SX), establecindose para todos los contrastes un nivel de confianza
del 95%.
Los datos obtenidos en las preguntas abiertas fueron analizados siguiendo las pautas
ofrecidas por Rodrguez, Gil y Garca (1996). As, una vez recopilados, se redujeron para una
mejor disposicin y transformacin de estos en resultados y conclusiones, con la ayuda de dos
analistas para el acuerdo en la categorizacin de respuestas y codificaciones. De este modo,
pudimos combinar los resultados de las respuestas formalizadas en los tems cuantitativos del
cuestionario con lo expresado abiertamente por los individuos en las preguntas abiertas.
978-84-695-8363-0
240
Resultados
Caractersticas sociodemogrficas de la muestra
Para la variable sexo el porcentajes de hombres que compone la muestra es del 40,6% y el
de mujeres del 59,6 %. La distribucin de la muestra en funcin de la variable edad est
dividida en tres intervalos: de 18 a 30 aos con un 23% de la muestra, de 31 a 45 aos
con el 54% y de 46 a 67 aos con el 30%. Para conocer el nivel de formacin de los sujetos,
creamos la variable Mximo nivel formativo reglado dividindola en diez niveles
comprendidos entre 1= sin estudios reglados y 10 = estudios de tercer ciclo, como se
muestra en la Tabla 2, donde pueden observarse algunas peculiaridades de la muestra que la
distancian de la poblacin real, como por ejemplo que no existen personas sin estudios
reglados y que el mayor porcentaje de la muestra en cuanto al mximo nivel formativo se
encuentra con un 21,5% en los estudios de Diplomatura, seguido de los de Licenciatura o
Grado.
Tabla 2
Variable mximo nivel formativo de los participantes
Niveles
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
8.
9.
10.
Porcentaje
0,00 %
13,1 %
15,0 %
9,30 %
6,50 %
21,5 %
18,7 %
4,70 %
8,40 %
2,80 %
978-84-695-8363-0
241
978-84-695-8363-0
242
Tabla 3
tems que componen cada variable
Variable conocimiento sobre las AC
tems en la variable
7.
8.
9.
Media
Porcentaje ms
alto
Diferencias
significativa
s
Qu nivel de conocimiento
tiene sobre qu es una Agencia
1.67
0.929
37,4%
ST/SX
de Colocacin
LO PRECISO
Conoce las diferencias entre
una Agencia de Colocacin y
1.39
1.131
29%
ST
una ETT?
NADA
Sabe cules son las funciones
y/o actividades a las que se
1.56
1.024
33%
ST
dedican las Agencias de
INSUFICIENTE
Colocacin?
Variable expectativas ante los servicios de orientacin
tems en la variable
Media
Porcentaje ms
alto
1.04
0.922
1.62
1.052
1.67
1.009
2.50
1.004
54.8%
S, MUCHO
NO
2.56
0.992
53.6%
S, MUCHO
SX
74.7%
NEGATIVAS
1.51
0.970
38%
LO PRECISO
ST/SX
**
**
71,25% ACL
**
35%
INSUFICIENTE
LO PRECISO
35.1%
LO PRECISO
31.3%
LO PRECISO
Diferencias
significativa
s
Contraste /
grado de
significacin
MW-ST/0.036
MW-SX/0.012
KW-ST/0.016
MW-ST/0.004
KW-ST/0.010
MW-ST/0.002
Contraste /
grado de
significacin
NO
NO
ST/SX
KW-ST/0.034
MW-ST/0.012
MW-SX/0.002
MW-SX/0.034
KW-ST/0.007
MW-ST/0.001
MW-SX/0.007
978-84-695-8363-0
1.79
0.937
28.9%
COMPROMISO
DE ORIENTADORES
41.8%
LO PRECISO
243
*
SX
MW-SX/0.019
1.52
0.980
39.8%
LO PRECISO
ST/SX
1.78
0.963
34.9%
LO PRECISO
ST/SX
1.82
1.008
36.6%
LO PRECISO
NO
KW-ST/0.021
MW-ST/0.041
MW-SX/0.007
KW-ST/0.040
MW-ST/0.033
MW-SX/0.008
Media
Porcentaje
ms alto
Diferencias
significativas
2.15
0.967
SEX
2.39
0.885
46.9%
S, MUCHO
58.6%
S, MUCHO
**
**
**
**
62.28%
NO, NADA
85.5%
NO, NADA
Contraste /
grado de
significacin
MW-SX/0.015
NO
ST
MW-ST/0.038
**
Variable opinin sobre necesidades de orientacin de las personas en desempleo o en trnsito hacia l.
tems en la variable
Media
Porcentaje
Diferencias
Contraste /
ms alto
significativas
grado de
significacin
26. Es necesario recibir apoyo
40.4%
NO
psico-pedaggico para afrontar la
2.08
0.992
S, MUCHO
situacin
27. Es
necesario
recibir
68%
orientacin para clarificar cules
2.56
0.750
S, MUCHO
NO
son los objetivos personales en
978-84-695-8363-0
244
MW-SX/0.037
tems en la variable
Media
Porcentaje
ms alto
Diferencias
significativas
Contraste /
grado de
significacin
2.03
1.138
48%
MUCHO
ST/SX
KW-ST/0.000
MW-SX/0.035
2.4
0.867
*
30.36%
SUPUESTAMENTE
CORRECTO
65.7%
MUCHO
28.9%
SUPUESTAMENTE
CORRECTO
ST/SX
KW-ST/0.002
MW-ST/0.001
MW-SX/0.011
(Los tems marcados con dos asterisco ** corresponden a preguntas dicotmicas, y los marcados con un
asterisco * a preguntas abiertas)
978-84-695-8363-0
245
978-84-695-8363-0
246
contratase para los trabajadores tuviesen una duracin reducida y pasado ese tiempo no
hubieran encontrado trabajo (tem 25).
Con respecto a las diferencias encontradas dependiendo de la situacin laboral de los
grupos, puede afirmarse que las personas en desempleo, si se encontraran en procesos de
reestructuracin empresarial, tendran una mejor actitud que las empleadas para cofinanciar
un buen servicio de orientacin profesional con parte de su indemnizacin por despido. Y en
cuanto al sexo, las mujeres aceptaran de mejor grado que los hombres que su empresa les
ofreciese los servicios de una ACL en dicha situacin.
Por lo general, puede afirmarse que los encuestados consideran que cubrir las
necesidades de orientacin por las que se les ha preguntado es importante para las personas en
desempleo o en trnsito hacia el mismo. Se considera especialmente importante la orientacin
para el autoempleo (tem 28), la orientacin para adecuar el perfil profesional a las ofertas de
empleo (tem 31) y la orientacin para ampliar estudios (tem 29).
Con respecto a las diferencias significativas, tan solo se aprecia que las mujeres
muestran una actitud ms favorable hacia la puesta en prctica de programas de orientacin
para aprender a generar empleo para uno mismo y para otros (tem 28). Podemos afirmar que
las personas encuestadas tendran una implicacin alta tanto en procesos de orientacin
profesional (tem 33), como en procesos de formacin para mejorar su cualificacin (tem 34),
especialmente en estos ltimos. En las preguntas abiertas, observamos que buena parte de las
personas muestra que su implicacin ante dichos procesos est influenciada por lo que la
sociedad actual cree que es un comportamiento adecuado al respecto. Por otro lado, aunque en
menor medida, se alegan razones basadas en sus necesidades de obtener nuevos
conocimientos o habilidades para renovar y mejorar sus opciones profesionales. Y en
porcentajes ms pequeos justifican su implicacin en razones estructurales tales como que el
problema es la crisis, u otras razones personales como la edad o el tiempo del que disponen.
Con respecto a las diferencias significativas, son las personas en desempleo en general y las
mujeres, en particular, quienes ms implicacin tendran en ambos procesos.
Finalmente, el tem 37 del cuestionario se formul como una pregunta abierta y
opcional que da la posibilidad de expresar libremente cualquier opinin o valoracin al
respecto de las ACL que no hubiese podido reflejarse en el cuestionario. Sintetizando los
resultados obtenidos mediante este tem, podemos decir que, en primer lugar, la muestra
desconoce en profundidad las funciones que pueden desempear las ACL, creyendo que son
estrictos intermediarios laborales con el objeto de que oferta y demanda de empleo se
encuentren. No se entiende cmo si las mismas fueran a desempear un lugar tan importante
en el mercado de trabajo dando servicios tales como la orientacin profesional o el desarrollo
de programas de insercin profesional, etc., no se hace publicidad de ello para que sea
conocido por las posibles personas usuarias. Por un lado, se piensa que los SPE podran
hacerse eficientes con el dinero pblico que se va a invertir en subvencionar a estas
instituciones privadas. Por otro, se considera positivo que colaboren con los SPE al objeto de
tener un mejor servicio de empleo para los ciudadanos.
Conclusiones
El objetivo de este estudio ha sido aproximarnos a los conocimientos y opiniones que
las personas adultas en edad de trabajar tienen sobre las ACL, y explorar si existen diferencias
en el resultado en funcin de variables como la situacin laboral y el sexo. En trminos
978-84-695-8363-0
247
generales, puede afirmarse que existe un conocimiento moderado en cuanto a las ACL. Este
nivel de conocimiento es independiente del sexo pero se encuentran diferencias significativas
segn la situacin laboral de las personas encuestadas, de forma que el colectivo de personas
desempleadas es el que afirma tener un conocimiento ms preciso sobre dichas agencias, en
concreto en cuanto a sus funciones y actividades y en lo relativo a las diferencias con las ETT.
Asimismo, la confianza puesta en los servicios de empleo, tanto pblicos como privados, en
general es baja y, en particular, menor para los SPE. Existen al respecto diferencias segn la
situacin laboral; en concreto las personas desempleadas se decantan por tener una mayor
confianza en las ACL que en los SPE.
Respecto a la actitud de los encuestados en relacin a la participacin en procesos de
orientacin, se ha identificado que todos los grupos considerados afirman mayoritariamente
que participaran en dichos programas. Tres cuartas partes de ellos afirman que si tuviesen
que decidirse entre uno de los dos servicios (ACL y SPE), elegiran una ACL para que le
ayudasen a mejorar su situacin laboral, pues se considera que pueden ofrecer las mismas
prestaciones que los SPE de forma ms efectiva. Los motivos que se dan para tomar dicha
decisin y para desconfiar de los SPE posiblemente estn relacionados con el compromiso
que los usuarios perciben de los orientadores y con la calidad de los servicios. Dicha
percepcin puede deberse a que no se realicen, tal y como aconsejan Snchez, lvarez,
Manzano y Prez (2009), seguimientos personalizados de los itinerarios profesionales, o bien
a que haya mucha distancia entre las expectativas de los usuarios de los SPE y la percepcin
de los orientadores sobre las mismas, pues cuando los orientadores no creen en la consecucin
de las expectativas del usuario, existe una influencia negativa en el resultado final (Lim y
Patton, 2006). La mayora de los usuarios de los SPE cree errneamente que la funcin de
estos es llamarles para trabajar, y dado a que no se les llama a tal fin, la opinin de los
mismos es que los SPE no funcionan. Son muy pocos los usuarios que conocen que de los
SPE se puede esperar que coloquen al demandante de empleo en las mejores condiciones para
buscarlo activamente, confirmndose en parte lo anunciado por Lim y Patton (2006), al
postular que los servicios de empleo crean dificultad a los usuarios para conocer qu se puede
esperar de ellos.
Por otro lado, la minora que esperaba de los SPE que pusiesen a su alcance
herramientas para ensearles a buscar empleo, los han valorado de manera menos negativa.
Lo que confirma que cuanto menor sea la diferencia entre las expectativas del cliente y las
percepciones de los profesionales de la orientacin sobre las mismas, mayor calidad tendr el
servicio (Lim y Patton, 2006). Por otro lado, las malas expectativas generalizadas en cuanto al
resultado de encontrar empleo mediante los SPE mejoraran para ms de la mitad de las
personas si la gestin la hiciese una ACL. Por grupos, las personas desempleadas en general y
las mujeres. en particular, confiaran en un mejor resultado de las ACL.
La mayora de las personas encuestadas piensan que las ACL pueden ser tiles para
los trabajadores despedidos en los procesos de reestructuracin, siendo las mujeres quienes
muestran mayor acuerdo con esta afirmacin. Sin embargo, en cuanto a la utilidad que estas
agencias pueden tener para las personas que conservan su empleo, se confirma la escasa
tradicin que existe en nuestro pas de acudir a especialistas en orientacin profesional
(Padilla-Carmona, 2001b), menos an si estas personas son trabajadoras en activo y acuden
para el importante hecho de entrenarse para reducir el impacto que pudieran sufrir si se
quedasen desempleadas (De Witte et al., 2005). As, podemos afirmar que las opiniones a
favor de la utilidad de estos programas preventivos son limitadas. Son los desempleados, as
como las mujeres, quienes en mayor porcentaje consideran que estas ACL seran tiles para
978-84-695-8363-0
248
aquellos que se mantienen trabajando, mientras que los que precisamente conservan su
empleo, y en particular los hombres, revelan en su inmensa mayora que las ACL no les seran
de mucha utilidad. Asimismo, se valorara muy positivamente que las empresas ofreciesen
servicios de ACL a sus trabajadores/as, en momentos de inseguridad laboral. En cuanto a la
actitud hacia participar en dichos programas, solo un 5.10% de las personas encuestadas
manifiesta que no lo hara, expresando el resto una muy alta intencin de participar.
Sin embargo, la inmensa mayora de las personas se negaran a cofinanciar un buen
servicio de colocacin ofrecido por su empresa a cambio de cobrar menos indemnizacin por
despido, al contrario de lo que ocurre en EEUU, donde curiosamente la eleccin mayoritaria
es participar en los programas privados de colocacin a cambio de cobrar menos
compensacin econmica (Westaby, 2004). En Espaa es an mayor la negativa a seguir con
los programas que la empresa ofrezca en caso de que los mismos tuviesen una duracin
reducida y pasado ese tiempo tuvieran que costearlo personalmente. No obstante, respecto a
esta cuestin, se encuentra alguna diferencia dependiendo de la situacin laboral de los
individuos, concretamente aquellos que estn en desempleo tendran una actitud ms positiva
hacia la cofinanciacin con parte de su indemnizacin por despido.
Por lo general, se piensa que los servicios de orientacin (apoyo psicopedaggico,
ayuda para la elaboracin del proyecto vital profesional, orientacin hacia el desarrollo del
espritu emprendedor, para la cualificacin profesional, para la conciliacin de la vida
personal con la profesional, hacia la ocupabilidad y empleabilidad y a colectivos con
dificultades de insercin) para las personas en situacin de trnsito profesional son necesarios
o muy necesarios. De mayor a menor importancia segn las medias obtenidas, se revela que
en primer lugar est la orientacin destinada a aprender a generar empleo, que es el servicio
de orientacin estimado como ms necesario. En el segundo y tercer puesto, se encuentra el
recibir orientacin para adecuar el perfil personal a las ofertas de empleo y as mejorar la
posibilidad de encontrar uno y recibir orientacin para ampliar estudios, respectivamente.
Este trabajo tiene limitaciones debidas al tamao reducido de su muestra, as como a la
seleccin no aleatoria de los encuestados. Sin embargo, creemos que nos ha permitido
explorar los conocimientos y actitudes hacia las ACL y tambin las opiniones existentes en
torno a los SPE. Esta informacin es relevante en un momento como el actual, en el que se
cuestionan estos servicios y se amplan las frmulas para fomentar la colocacin a travs de
agencias privadas que todava son poco conocidas, aunque generan expectativas positivas.
Entendemos que en el futuro ser necesario profundizar en las diferencias entre las ACL y los
SPE, promoviendo una investigacin ms exhaustiva de las expectativas existentes respecto a
ambos, as como de la satisfaccin de sus usuarios.
Referencias
BUENDA, L., COLS, M.P. y HERNNDEZ-PINA, F. (2003). Mtodos de investigacin en
psicopedagoga. Madrid: McGraw-Hill.
CALVO, F.J.yRODRGUEZ-PIERO, M.C. (2011). Colocacin y servicios de empleo. Madrid:
Consejo Econmico y Social.
COROMINAS, E.eISS, S.(1998). Transiciones y orientacin. Revista de Investigacin
Educativa, 16(2), 155-184.
978-84-695-8363-0
249
DE WITTE, H., VANDOORNE, J., VERLINDEN, R.yDE CUYPER, N. (2005). Outplacement and reemployment measures during organizational restructuring in Belgium: Overview of the
literature and results of qualitative research. Journal of European Industrial
Training, 29(2), 148-164.
DORES, M. y ABRANTES, P. (2005). Transiciones a la vida adulta en la era de la globalizacin:
recorridos de incertidumbre. Recerca: Revista De Pensament i Anlisi, 5, 63-86.
EBY, L.T. y BUCH, K. (1995). Career concerns, values and role salience in employed men. The
Career Development Quarterly, 43(4), 338-349.
ENRIQUES, M.J. (2007). Desarrollo y gestin de carreras con adultos en el siglo XXI: lecturas
hacia una armonizacin de lo global y de lo individual. Revista Electrnica de
Investigacin Psicoeducativa y Psicopedaggica, 5(1), 75-102. Disponible en
<http://www.investigacion-psicopedagogica.org/revista/new/ContadorArticulo.php?159>
Fecha de consulta 11/03/2012.
GIL, J., RODRGUEZ, G. y GARCA, E. (1995). Estadstica bsica aplicada a las ciencias de la
educacin. Sevilla: Kronos.
HERNNDEZ FERNNDEZ, J. y R UZ DEL CERRO, J. (2002). La orientacin laboral a
desempleados inscritos en las oficinas de empleo del INEM. Revista Espaola de
Orientacin y Psicopedagoga, 13(1), 121-123.
LATACK, J.C. y DOZIER, J.B.(1986). After the ax falls: Job loss as a career transition. Academy
of Management Review, 11, 375-392
LEY (2003). Ley 56/2003, de 16 de diciembre, de empleo. Boletn Oficial del Estado,
16/12/2003. Disponible en: <http://www.boe.es/boe/dias/2003/12/17/pdfs/A4476344771.pdf>
LEY (2010). Ley 35/2010, de 17 de septiembre, de medidas urgentes para la reforma del
mercado de trabajo. Boletn Oficial del Estado, 18/09/2010. Disponible en
<http://www.boe.es/boe/dias/2010/09/18/pdfs/BOE-A-2010-14301.pdf>
LEY (2012). Ley 3/2012, de 6 de julio, de medidas urgentes para la reforma del mercado
laboral.
Boletn
Oficial
del
Estado,
11/2/2012.
Disponible
en
<https://www.boe.es/boe/dias/2012/07/07/pdfs/BOE-A-2012-9110.pdf>
LIM, R. y PATTON, W. (2006). What do career counsellors think their clients expect from their
services? Are they right? Australian Journal of Career Development, 15(2), 32-41.
LONDON, M. y NOE, R.A. (1997). Londons career motivation theory: An update on
measurement and research. Journal of Career Assessment, 5(1), 61-80.
MCGREEVY, M. (2010). Do we reinvent ourselves actually? Industrial and Commercial
Training, 42(7), 366-378.
MINISTERIO DE ECONOMA Y HACIENDA (2011). Real Decreto 3/2011, de 14 noviembre, por el
que se aprueba el texto refundido de la Ley de Contratos del Sector Pblico. Boletn
978-84-695-8363-0
250
978-84-695-8363-0
251
SOBRINO, G.M. (2011). Rgimen jurdico de las agencias de colocacin. Temas Laborales.
Revista Andaluza de Trabajo y Bienestar social, 110, 43-72.
WESTABY, J.D. (2004). The impact of outplacement programs on reemployment criteria: A
longitudinal study of displaced managers and executives. Journal of Employment
Counseling, 41(1), 19-28.
978-84-695-8363-0
252
Resumen
Las personas con discapacidad intelectual presentan una serie de rasgos especficos que
pueden dificultar su participacin en los diferentes contextos de la sociedad, entre ellos el
empleo. Por este motivo, la Organizacin Mundial de la Salud ha insistido en la necesidad de
identificar aquellas trabas que pueden dificultar el acceso al empleo de estas personas.
Mediante un enfoque cuantitativo y un diseo no experimental descriptivo se recogieron las
creencias y percepciones de 118 familias, 54 profesionales y 60 personas con discapacidad
intelectual a travs de encuesta, entrevista en profundidad y grupo de discusin. Los
resultados indican: (a) divergencias en las expectativas de los tres grupos con respecto a las
expectativas laborales de las personas con discapacidad intelectual, (b) un papel
preponderante de las madres en la sobreproteccin de sus hijos. Las implicaciones prcticas
se relacionan con la necesidad de realizar una orientacin profesional tanto con la persona
con discapacidad como con su familia, y formar al alumno con discapacidad intelectual para
su autodeterminacin.
Descriptores: Discapacidad intelectual, Empleo, Familias.
Abstract
People with intellectual disabilities have a number of specific features that may hinder their
participation in the various contexts of society, including employment. For this reason, the
World Health Organization has emphasized the need to identify those obstacles that may
hinder access to employment for these people. Using a quantitative approach and a non
experimental descriptive design, beliefs and perceptions were collected from 118 families, 54
professional and 60 people with intellectual disabilities through survey, in-depth interview
and discussion group. The results indicate: (a) differences in the expectations of the three
groups regarding job expectations of people with intellectual disabilities, (b) a major role of
mothers in their children's overprotection was identified. The practical implications are
related to the need for professional guidance to both the disabled person and to his family,
and train students with intellectual disabilities about self-determination.
Keywords: People with intellectual disabilities, Employment, Families.
978-84-695-8363-0
253
Introduccin
En la actualidad, mil millones de personas en el mundo, el 15% de la poblacin,
presentan algn tipo de discapacidad (OMS, 2011). De ellas, 3,85 millones viven en Espaa y
724.800 tienen una deficiencia mental (INE, 2008a). En los ltimos aos, se ha evolucionado
significativamente en la inclusin de estas personas y se han mejorado notablemente los
servicios que se les ofrecen (Albor, Pea, y Ortega, 2006). A esto han contribuido, adems del
desarrollo normativo, los cambios en la concepcin del retraso mental. Este hecho puede
constatarse en las definiciones que progresivamente han ido elaborando organizaciones como,
por ejemplo, la American Association on Intellectual and Developmental Disabilities
(AAIDD) (Luckasson et al., 2002; Schalock et al., 2010) o la Organizacin Mundial de la
Salud (OMS) (OMS, 2001). Las transformaciones se han producido muy rpidamente, en
cinco o seis dcadas a lo sumo, por lo que los nuevos modelos tericos sobre la discapacidad
se han ido desarrollando en un espacio de tiempo relativamente breve, coexistiendo con los
modelos tradicionales (e.g., el modelo mdico, el modelo psicolgico, la perspectiva
asistencial, la visin caritativa); de ah que no exista en la actualidad una visin terica
uniforme sobre la discapacidad intelectual.
El predominio en un entorno de una u otra concepcin de la discapacidad conlleva la
presencia de determinadas creencias y actitudes hacia la misma. Por este motivo, pueden
identificarse creencias, percepciones y expectativas dispares segn el contexto. En la esfera de
la atencin a las personas con discapacidad (ya sea escolar, familiar, asociativa, laboral, etc.),
esta situacin puede generar tensiones entre las familias, los profesionales y el alumnado a la
hora de abordar las orientaciones y el contenido de los servicios que reciben. Las creencias
del entorno social acerca de las posibilidades de acceso al empleo de la persona con
discapacidad intelectual constituyen uno de los factores involucrados en el desarrollo de las
destrezas laborales (Fitzgerald y Betz, 1994; Vondracek y Schulenberg, 1992). Estas ideas de
los dems, a su vez, afectan a las creencias que sobre s misma elabora la propia persona (Lent
y Hackett, 1994). De este modo e inconscientemente, las bajas expectativas hacia el individuo
con discapacidad son el punto de partida de un crculo vicioso que limita significativamente
sus posibilidades (OBrien, 1985). Para romper esta tendencia resulta crucial identificar y
modificar las creencias, muchas veces errneas, sobre sus posibilidades de desarrollo (Barton,
2009; Caleidoscopia, 1996; OMS, 2011; Valls, Vil, y Pallisera, 2004).
En su Informe Mundial sobre la Discapacidad, la Organizacin Mundial de la Salud
(OMS) advirti que uno de los factores de discriminacin ms importantes en el empleo de la
personas con discapacidad intelectual son las creencias de su entorno. Por este motivo, resulta
necesario identificar claramente la naturaleza y el contenido de dichas percepciones al objeto
de proceder al cambio o modificacin de las creencias infundadas o estereotipos hacia las
posibilidades de su insercin laboral. Sobre esta cuestin, se considera que para que la
intervencin en el cambio de estas creencias logre tener xito ha de realizarse de forma
focalizada, es decir, en contextos especficos.
Las personas con discapacidad intelectual conviven con las creencias y percepciones
acerca de sus posibilidades laborales que provienen, entre otros, de sus familias, de los
profesionales pertenecientes a los centros a los que asisten, de otras personas con
discapacidad, y de ellos mismos. Estas ideas pueden favorecer o bien limitar su desarrollo
potencial. Roese y Sherman (2007) indicaron que cuando las creencias expresan un
rendimiento futuro esperado se denominan expectativas. La expectativas sobre su potencial
generan lo que se denomina efecto Pigmalin (Terrassier, 1996), consistente en la adaptacin
978-84-695-8363-0
254
del sujeto a las expectativas de rendimiento que percibe en el entorno, especialmente de las
personas de referencia (e.g., padre y madre, hermanos/as, profesionales). Estas expectativas
ajenas condicionan sus autoexpectativas y, como resultado, sus posibilidades de desarrollo
(Lent y Hackett, 1994). En este sentido, OBrien (1985) alert de que la presencia de bajas
expectativas en el contexto poda provocar una reduccin o privacin de oportunidades y, por
lo tanto, un empeoramiento progresivo de su funcionamiento competencial.
Segn sean las creencias en el seno de la familia, sta puede desarrollar actitudes ms
o menos favorables hacia la inclusin laboral de la persona con discapacidad intelectual
(Caleidoscopia, 1996; Li, 1998). DeLoach y Greer (1981) evidenciaron que las creencias de
las familias influyen en la autoaceptacin de la discapacidad del hijo. Otro de los modos en
que la actitud de la familia incide en el desarrollo del individuo son los miedos de los padres.
Las familias parecen convivir con miedos que limitan las posibilidades de autonoma que
ofrecen a sus hijos, desarrollando, en ocasiones, actitudes de sobreproteccin (Valls et al.,
2004).
Los hallazgos derivados de las investigaciones realizadas tanto en el contexto
internacional (Gobierno de Canad, 2004; National Disability Authority, 2007; Special
Olympics, 2003) como en el espaol (Caleidoscopia, 1996; Fernndez, Arias, y Gallego,
1999; Fundacin Equipara, 2008) han evidenciado que existen bajas expectativas laborales
hacia las personas con discapacidad intelectual. Asimismo, se tiende a pensar que los entornos
segregados, como por ejemplo los centros especiales de empleo, son los que mejor pueden
adecuarse a sus caractersticas. Por otra parte, el empresariado muestra an un significativo
desconocimiento acerca de las personas con discapacidad y, por lo tanto, una actitud reticente
hacia su contratacin.
La investigacin acerca de la integracin laboral de las personas con discapacidad
intelectual y sus posibilidades de acceso al empleo han sido principalmente abordadas desde
perspectivas amplias (e.g., actitudes sociales hacia la discapacidad) y no tanto focalizadas en
contextos concretos, como podra ser el caso de una asociacin. En estos trabajos no suele
incluirse la voz de las propias personas con discapacidad y, ms an, en muy pocas ocasiones
suele realizarse mediante estrategias cualitativas, tales como la entrevista en profundidad o los
grupos de discusin (Pallisera, 2003).
En este estudio se describen y comparan las creencias y percepciones que los
implicados en el proceso de integracin laboral (i.e., familias, profesionales, y personas con
discapacidad intelectual) tienen sobre dichos factores con el propsito de conocer sus puntos
de vista y proponer estrategias para mejorar la situacin. Este propsito se trat de concretar
en la siguiente pregunta de investigacin: cules son los factores familiares implicados en la
formacin y el acceso al empleo de las personas con discapacidad intelectual? Existen
diferencias segn el grupo y el gnero?
Mtodo
La aproximacin al problema se realiz mediante un enfoque metodolgico
cuantitativo de corte no experimental, siguiendo un diseo transeccional descriptivo mediante
encuesta (Albert Gmez, 2007). La poblacin estaba formada por las familias, los
profesionales y las personas con discapacidad intelectual pertenecientes a una Asociacin propersonas con discapacidad intelectual de la Comunidad Valenciana. El total de la poblacin
ascenda a 1.715 personas, de las cuales 800 eran familias, 115 eran profesionales y 800 eran
978-84-695-8363-0
255
978-84-695-8363-0
256
Tabla 1.
Creencias sobre la capacidad laboral de las personas con discapacidad intelectual
Familias
f
PCDI a
Profesionales
f
Total
46
42
12
24
48
76
36
Mujer
32
23
13
51
36
Varn
14
24
11
18
25
42
59
54
39
81
26
52
124
60
Mujer
44
31
33
23
13
90
63
Varn
15
25
10
13
22
34
57
Mujer
Varn
110
100
48
100
50
100
208
100
NS/NC
Total
978-84-695-8363-0
257
Familias
Profesionales
Total
Centro ocupacional
16
14
18
12
48
44
15
31
63
40
35
32
24
50
59
37
Otros
13
Total
110
100
48
100
158
100
Padres
Madres
Total
Centro ocupacional
11
17
12
13
37
34
51
43
48
12
50
21
32
33
37
24
100
66
90
100
978-84-695-8363-0
258
personas con discapacidad. Adems, consideraban que en estos centros iban a disponer de
mayores apoyos. En las entrevistas se pudieron constatar tambin las divergencias entre el
punto de vista del padre y de la madre. Los padres consideraban que en la modalidad de
empleo con apoyo se les exigira ms y esto sera favorable para evitar que se acomodasen.
Por su parte, las madres consideran que eran preferibles entornos ms controlados y con
mayor nivel de apoyo, en los que se comprendiesen bien las caractersticas y necesidades de
estas personas. Todas las madres opinaron que su eleccin estaba directamente condicionada
por sus miedos y por el inters de proteger a sus hijos de posibles abusos (e.g., que se ran de
ellos, que no se sientan bien all, que no se integren con los dems). Adems, reconocieron
que el papel de la madre es preponderante en la toma de decisiones sobre sus hijos: Los
padres no tienen mucha voz y voto con los hijos con discapacidad. La madre es la que toma el
mando con ellos. [] Esto es as en todas las familias que conozco (Familiar 1M).
En los cuestionarios, las familias indicaron que en el mbito familiar consideran clave
motivar, apoyar y animar al joven hacia el empleo (Es importante que se sientan apoyados
por los padres). Tambin resaltaron otros aspectos como no sobreproteger y fomentar su
autonoma (Hay que ayudarles a hacer ellos solos todo lo que puedan), dar importancia y
apoyar la formacin, fomentar la confianza en s mismo, ayudarle a superar sus fracasos (La
familia tiene que ayudarles a tirar adelante y a superar los fracasos que les ocurren), y que se
sienta querido y necesario. En las entrevistas, las familias consideraron que su papel como
familiares es crucial en el desarrollo de la persona con discapacidad: En las familias es donde
empieza todo. Ah es donde se debera empezar a tratar a estas personas. Lo que pasa es que a
los padres cuando tenemos un hijo as nadie nos ensea a educarlos (Familia 1M). Por otra
parte, las familias expresaron la creencia de que estas personas son muy vulnerables. Por este
motivo, la familia vive con muchos miedos ante cualquier posible avance en su autonoma,
porque Las personas con discapacidad son fciles de convencer y de manipular, y eso es muy
peligroso (Familiar 1M). En general, los miedos se proyectaban fuera del hogar, de una
forma abstracta. No hacan referencia a miedos concretos, referidos a lugares o claramente
identificados, sino que eran ms bien amenazas potenciales: que abusen de ellos, que se ran,
que les hagan sentir mal, que les roben, etc.: A veces no les dejamos salir a la calle. Pero no
es tanto por ellos sino por los dems, por lo que les puedan hacer (Familiar 3M). Asimismo,
indicaron que existen ciertas diferencias en los miedos segn si el hijo con discapacidad es
varn o mujer. Por ejemplo, en las mujeres con discapacidad les preocupaba especialmente un
posible abuso sexual o un embarazo no deseado, pero no tanto en los varones. Adems, las
madres indicaron que los padres adoptaban una postura mucho ms protectora si se trataba de
una hija con discapacidad. Por otra parte, exista una preocupacin compartida sobre el futuro:
A m me preocupa el futuro, qu pasar con ella cuando nosotros no estemos (Familiar 8V).
Las familias indicaron tambin la existencia de diferencias de opinin entre el padre y
la madre en la educacin de su hijo con discapacidad. En este sentido, afirmaron: El hombre
y la mujer lo ven diferente. Creo que las mujeres son ms realistas con sus hijos, pero tambin
son ms protectoras. Los hombres no ven tanto el peligro, y la madre siempre est pensando
las cosas que le pueden pasar (Familiar 3V). Todas las madres entrevistadas reconocieron
que se sentan ms protectoras que los padres y que convivan con muchos miedos. Adems,
reconocieron que estos miedos limitaban en gran medida las posibilidades de sus hijos. Estas
diferencias entre padres y madres eran fuente de tensiones en el hogar: A veces las personas
con discapacidad generan mucha impotencia a su alrededor, mucha frustracin (Familiar
3V).
978-84-695-8363-0
259
Discusin
Todos los grupos mostraron acuerdo acerca de que: (a) slo algunas personas con
discapacidad pueden trabajar, (b) que este hecho se ve directamente influido por el nivel de
discapacidad, (c) que nicamente las personas con niveles de discapacidad leve o moderado
pueden acceder al empleo, y (d) que los trabajos a los que acceden son aquellos basados en
tareas repetitivas y en oficios que exigen escasa cualificacin. Estos resultados son coherentes
con los hallazgos de la Joseph Rowntree Foundation (1996) y de McConkey y Mezza (2001).
En ellos, se sealaba que la expectativa de que una persona con discapacidad pueda trabajar
est condicionada por la percepcin de las dificultades que presente el sujeto. As, se tiende a
pensar que no todos pueden trabajar, sino que depende de sus caractersticas. Los tres grupos
coincidan en la creencia de que an existen muchas barreras para el acceso al empleo, incluso
entre aquellas personas que ya se encuentran preparadas para ello. Este hecho ya se haba
puesto de manifiesto en investigaciones anteriores (Colectivo IO, 1998, 2003; Gmez y
Cardona, 2010; INE, 2008b; OIT, 2003; OMS, 2011). Los obstculos que sealaron se
relacionaban, por una parte, con el desconocimiento de sus posibilidades laborales por el
empresariado y, por otra, con acciones discriminatorias (e.g., expectativas segn su nivel de
discapacidad, prejuicios, sobreproteccin).
Sobre la modalidad que resulta preferible para el acceso al empleo, se observ que la
opinin general es que el centro especial de empleo es la ms adecuada (40%), aunque por
escasa diferencia con respecto al empleo con apoyo (37%). No obstante, al comparar las
puntuaciones de las familias y los profesionales se observ que existe divergencia de
opiniones. Las familias consideraron preferible el centro especial de empleo, mientras que los
profesionales juzgaron como mejor el empleo con apoyo. Las reticencias de las familias a la
inclusin laboral de sus hijos en entornos ordinarios ya haban sido descritas en trabajos
anteriores (Bishop y Epsein, 1980; Caleidoscopia, 1996; Li, 1998; Miles, 1988). Asimismo,
existe evidencia de que las familias perciben a los centros especiales de empleo como una
alternativa que ofrece mayor estabilidad laboral (Valls et al., 2004). nicamente se han
detectado diferencias estadsticamente significativas segn el gnero con respecto a la
modalidad preferible para la insercin laboral. Estas diferencias de gnero se han identificado
especficamente en el seno de la familia, entre padres y madres. Las madres prefirieron la
modalidad del centro especial de empleo, mientras que los padres optaron por el empleo con
apoyo. Estas divergencias en el hogar fueron descritas como un motivo potencial de conflictos
en la pareja. Al observar en conjunto los grupos, se ha observado que los padres, los
profesionales y las personas con discapacidad prefieren modalidades menos segregadas que
las madres. La clave de esta divergencia son los miedos presentes en las madres. stas
conviven con muchos temores, especialmente en lo relativo a potenciales abusos de sus hijos
(e.g., robos en la calle, abusos sexuales, insultos), lo cual lleva a las madres a preferir
entornos con mayor nivel de apoyo y supervisin, que velen por la proteccin de sus hijos. En
este sentido, las madres parecen ser la clave de la sobreproteccin de las personas con
discapacidad intelectual. Los participantes resaltaron la importancia del apoyo familiar para
lograr acceso al empleo, lo cual coincide con los hallazgos de estudios previos (Valls et al.,
2004).
Respecto de los factores del entorno familiar, se concluye que (a) el apoyo de la
familia es clave para que la persona pueda acceder al empleo, (b) una de las claves de la
discriminacin en el hogar parecen ser los miedos de la madre, (c) es necesario seguir
concienciando a la sociedad y al empresariado de las necesidades y posibilidades de las
978-84-695-8363-0
260
personas con discapacidad intelectual, (d) debe velarse por el cumplimiento de la legislacin
relativa a la promocin de empleo para colectivos desfavorecidos.
En funcin de lo indicado, cabe destacar como implicaciones prcticas la necesidad
de: (a) Realizar orientacin a la familia en paralelo al trabajo con el alumno con discapacidad
intelectual, (b) realizar una evaluacin funcional peridica de las destrezas y del potencial
laboral de individuo y (c) realizar orientacin profesional diferencial desde la escuela,
trabajando tanto con el alumno como con su familia.
Referencias
Albert Gmez, M. J. (2007). La investigacin educativa. Claves tericas. Madrid: McGraw
Hill.
Albor Gonzlez, J., Pea Cebrecos, C., y Ortega Camarero, M. (2006). Cincuenta y cinco
aos de pensamiento en torno a las necesidades educativas especiales y el trnsito
hacia el empleo de las personas con discapacidad intelectual: la perspectiva de FEAPS
(1960-2005). En J. M. Ibez Martnez Losa (Ed.), Libro verde sobre los itinerarios
hacia el empleo de los jvenes con discapacidad intelectual (pp. 17-71). Badajoz:
Aprosuba.
Barton, L. (2009). Estudios sobre discapacidad y la bsqueda de la inclusividad.
Observaciones. Revista de Educacin, 349, 137-152.
Bishop, D. S., y Epstein, N. B. (1980). Family problems and disability. En D. S. Bishop
(Comp.), Behaviour problems and the disabled: assessment and management (pp.
347-364). Baltimore: Williams and Wilkins.
Blessing, L. A., y Jamieson, J. (1999). Employing persons with an intellectual disability:
Effects of previous experience. Canadian Journal of Rehabilitation, 12(4), 211- 221.
Caleidoscopia (1996). Factores personales y sociales de la integracin laboral de las
personas con discapacidad. Madrid: Real Patronato de Prevencin y Atencin a
Personas con Minusvala.
Colectivo IO (1998). Discapacidad y trabajo en Espaa. Madrid: IMSERSO.
Colectivo IO (2003). La insercin laboral de las personas con discapacidades. Barcelona:
Fundacin La Caixa.
DeLoach, C., y Greer, B. G. (1981). Adjustment to severe physical disability: a
metamorphosis. Nueva York: McGraw-Hill.
Fernndez, D., rias, E., y Gallego, L. (1999). Cultura empresarial. Motivaciones de los
empresarios para la inclusion laboral de personas con discapacidad. A Corua:
Fundacin Paideia.
Fitzgerald, K. F., y Betz, N. E. (1994). Career development in cultural context: The role of
gender, race, class and sexual orientation. En M. L. Savickas y R. W. Lent (Eds.),
978-84-695-8363-0
261
Convergence in career development: Implications for science and practice (pp. 103117). Palo Alto: CPP.
Fundacin Equipara (2008). Informe Equipara 2008. Observatorio para la mejora de la
equiparacin laboral de personas con discapacidad. Barcelona: Autor.
Gobierno de Canad (2004). Advancing the inclusion of persons with disabilities. Disponible
en:
http://www.cndd.ca/assets/research%20documents/Canadian%20Government/Support
ing%20Persons%20with%20Disabilities%20-%20Can%20Govt.pdf.
Fecha
de
consulta: 10/01/2012.
Gmez Puerta, J. M., y Cardona Molt, M. C. (2008a). Creencias y Percepciones sobre las
Posibilidades Laborales de las Personas con Discapacidad Intelectual (no publicado).
INE [Instituto Nacional de Estadstica] (2008a). Encuesta sobre discapacidades, autonoma
personal y situaciones de dependencia 2008. Disponible en:
<http://www.ine.es/jaxi/menu.do?type=pcaxis&path=/t22/p320/a2008&file=pcaxis>.
Fecha de consulta: 09/06/2011.
INE [Instituto Nacional de Estadstica] (2008b). El empleo de las personas con discapacidad.
Ao 2008. Disponible en:
<http://www.ine.es/jaxi/menu.do?type=pcaxis&path=%2Ft15%2Fp418&file=inebase
>. Fecha de consulta: 07/07/2011.
Joseph Rowntree Foundation (1996). Supported employment for people with intellectual
disabilities. Social Care Research Findings n 86. Nueva York: Autor.
Lent, R. W., y Hackett, G. (1994). Sociocognitive mechanisms of personal agency in career
development: Pan theoretical prospects. En M. L. Savickas y R. W. Lent (Eds.),
Convergence in career development: Implications for science and practice (pp. 77101). Palo Alto: CPP.
Li, E. P. (1998). Vocational aspirations of sheltered workshops workers. Journal of
Intellectual Disability Research, 42, 208-217.
Luckasson, R., Coulter, D. L., Polloway, E. A., Reiss, S., Schalock, R. L., Snell, M. E.,
Spitalnik, D. M., y Stark, J. A. (1992). Mental retardation. Definition, classification
and systems of supports. Washington: American Association on Mental Retardation.
Luckasson, R., Bornthwick-Duffy, S., Buntinx, W., Coulter, D. L., Craig, E. M., Reeve, A.,
Schalock, R. L., Snell, M. E., Spitalnik, D. M., Spreat, S. y Tasse, M. J. (2002).
Mental retardation. Definition, classification and systems of supports. Washington:
American Association on Mental Retardation.
McConkey, R. y Mezza, P. (2001). Employment aspirations of people with learning
disabilities attending day centres. Journal of Learning Disabilities, 5(4), 309-318.
Miles, M. (1988). La deficiencia mental profunda: el ltimo desafo. Siglo Cero, 116, 16-56.
978-84-695-8363-0
262
National Disability Authority (2007). Public Attitudes to Disability in Ireland. Disponible en:
http://www.nda.ie/cntmgmtnew.nsf/0/FD9B9DBF1F1CF617802573B8005DDED5/$F
ile/Survey.pdf. Fecha de consulta: 10/01/2012.
O'brien, J. (1985). Dignificacin de las personas e integracin en la comunidad en los
programas de atencin. Siglo Cero, 102, 51-60.
OIT [Organizacin Internacional del Trabajo] (2003). La hora de la igualdad en el trabajo.
Ginebra: Autor.
Oliver, M. (1992). Changing the social relations of research production? Disability & Society,
7(2), 101-114.
OMS [Organizacin Mundial de la Salud] (1983). Clasificacin Internacional de
Deficiencias, Discapacidades y Minusvalas (CIDDM). Madrid: INSERSO.
OMS [Organizacin Mundial de la Salud] (2001). Clasificacin internacional del
funcionamiento, de la discapacidad y de la salud (CIF). Madrid: IMSERSO.
OMS [Organizacin Mundial de la Salud] (2011). Informe mundial sobre la discapacidad.
Malta: Autor.
Pallisera Daz, M. (2003). Capacidad intelectual lmite e integracin laboral: desde la
relatividad conceptual al anlisis de las experiencias integradoras. Bordn, 55(4), 555568.
Pallisera, M., Vil, M., y Valls, M. J. (2004). The current situation of supported employment
in Spain: analysis and perspectives based on the perception of professionals. Disability
& Society, 6(18), 797-810.
Roese, N. J., y Sherman, J. W. (2007). Expectancy. En A. W. Kruglanski y E. T. Higgins
(Eds.), Social Psychology: Handbook of Basic Principles (pp. 91-115). Nueva York:
Guilford Press.
Schalock, R. L., Borthwick-Duffy, S. A., Bradley, V., Buntix, W. H. E., Coulter, M. D.,
Craig, E. M., Gomez, S. C., Lachapelle, Y., Luckasson, R., Reeve, A., Shogren, K. A.,
Snell, M. E., Spreat, S., Tass, M. J., Thompson, J. R., Verdugo, M. A., Wehmeyer,
M. L., y Yeager, M. H. (2010). Intellectual disability. Definition, Classification, and
Systems of Supports. Washington: American Association on Intellectual and
Developmental Disabilities (AAIDD).
Special Olympics (2003). Estudio multinacional de actitudes hacia las personas con
discapacidad intelectual. Disponible en:
http://info.specialolympics.org/NR/rdonlyres/e7bnjytrnebu2zct2o67y2gqs6ifd2e75figx
b2opvzjm6qdiusc34u6gyks5np7mskf33dlwwqygimvjjunyglbpbd/multinational_study
_spanish.pdf. Fecha de consulta: 15/01/2012.
Terrassier, J. CH. (1996). La disincrona. Creatividad y rigidez de la escuela frente al derecho
a la diversidad. En Y. Benito Mate (Coord.), Desarrollo y educacin de los nios
superdotados (pp. 251-259). Salamanca: Amar.
978-84-695-8363-0
263
978-84-695-8363-0
264
Resumen
Conocer qu implica para un centro la puesta en marcha de un Programa de Cualificacin
Profesional Inicial (PCPI) es el objetivo del estudio de caso que se presenta. En qu medida
la ley facilita el desarrollo de un PCPI, qu tienen en comn las trayectorias acadmicas,
familiares, sociales y culturales de los alumnos/as de estos programas y quin conforma el
equipo educativo son otras de las cuestiones que se han abordado en este estudio. El carcter
restrictivo de la normativa reguladora, las competencias que demanda el desarrollo de la
docencia en estos programas, el desconocimiento que otros discentes tienen sobre los PCPI,
la inexistente vinculacin familias-centro, las transformaciones que debe realizar un centro
al incorporar un PCPI y la peculiar trayectoria escolar de los estudiantes de estos
programas son los aspectos sobre los que se centran las conclusiones de este estudio.
Descriptores: Programas de Cualificacin Profesional Inicial, Estudio de caso,
Investigacin descriptiva, Entrevistas biogrficas.
Abstract
The aim of this study is to know what it means for a Secondary School center carry on an
Initial Professional Training Program. This research analyzes and discusses about the laws
which governing these programmes, the cultural, social and family trajectories of the students
of these programmes and the educational team that management this programmes.
Keywords: Initial Professional Training Program, Case Study, Descriptive research and
Biographical interviews.
Introduccin
Marco Terico
Los Programas de Cualificacin Profesional Inicial (en adelante PCPI), constituyen
una de las grandes novedades introducidas por la Ley General de Educacin en el ao
acadmico 2008/2009. Con ellos, el alumnado con problemas de fracaso escolar tiene la
oportunidad de volver al sistema educativo. Son programas con un carcter profesionalizador
que suponen un cambio metodolgico, organizativo y didctico de su homloga, la
Educacin Secundara Obligatoria. Estos programas constituyen una excelente medida
978-84-695-8363-0
265
encaminada a la consecucin del xito escolar por todos los alumnos/as (Vega y Aramendi,
2010).
Los PCPI se encuentran regulados a travs de la Orden de 24 de junio de 2008:
ampliar las competencias bsicas del alumnado para proseguir estudios en las diferentes
enseanzas, permitir que el alumnado alcance las competencias profesionales propias de una
cualificacin de nivel uno (CNCP- Ley Orgnica 5/2002, de 19 de junio) y dotar al alumnado
de posibilidades reales para una insercin socio-laboral satisfactoria son los objetivos que esta
Orden otorga a estos programas.
Sus destinatarios son menores entre los 16 y 22 aos que por distintas razones no
hayan obtenido el ttulo de Graduado en Educacin Secundaria Obligatoria. Estos programas
se estructuran en mdulos obligatorios, Mdulos especficos y de formacin general y
Mdulos voluntarios (de comunicacin, social y cientfico-Tecnolgico). Esta Orden regula la
tipologa de profesorado que imparte esta docencia y la forma de acceso a la misma.
La certificacin acadmica expedida por la Administracin educativa a aquellas
personas que superen los mdulos obligatorios de un programa de cualificacin profesional,
dar derecho, a quienes lo soliciten, a la expedicin del certificado de profesionalidad
correspondiente por parte de la Administracin laboral. Por otra parte, la superacin de los
citados mdulos supondr tambin la exencin de una parte de la prueba de acceso a los
ciclos formativos de grado medio, facilitando de este modo al alumnado la continuidad en
estudios conducentes a titulaciones del sistema educativo. Se ofrecen por tanto, a estos
jvenes diversas vas de insercin laboral y educativa que son, en definitiva, la finalidad
primordial de los programas.
A pesar, de que solo llevan implementndose tres aos acadmicos, los PCPI han sido
objeto de estudio por diferentes autores. As, Marhuenda (2006) nos muestra los retos a los
que deben de hacer frente los PCPI, destinados a jvenes con una baja cualificacin y a su
vez, muestran los elementos que deben adaptarse en el sistema educativo. Vega y Aramendi
(2010) diagnostican las necesidades formativas de los estudiantes del primer curso de un
PCPI en Guipzcoa. Mediante una investigacin exploratoria y descriptiva, indican que las
necesidades formativas ms apremiantes se centran en el desarrollo de competencias
vinculadas con el mbito laboral (aprender un oficio para tener una oportunidad en el mercado
laboral) y con el relacional (resolver conflictos, mantener conversaciones, encajar crticas).
Estos mismos autores Aramendi y Vega (2012), en otra de sus investigaciones, indican que el
alumnado de los PCPI se encuentra satisfecho con la forma de trabajar de estos programas,
con el desarrollo alcanzado en las competencias relacionales, en el rea laboral, los procesos
de enseanza-aprendizaje, la tutora, los procesos de orientacin, pautas y hbitos vinculados
con la salud.
Romero et. al (2012) presentan los principales resultados obtenidos con la tcnica
proyectiva-mediadora del fotolenguaje en una investigacin sobre la orientacin del alumnado
de Formacin Profesional Inicial (FP) en el sistema educativo espaol (tanto en Programas de
Cualificacin Profesional Inicial como Ciclos Formativos de Grado Medio y Superior). En
ella se establecen dos mbitos dentro de la orientacin: la orientacin personal dirigida a
recuperar el autoconcepto y la confianza en las propias posibilidades de xito; y la orientacin
destinada a ayudarle a construir su proyecto profesional y vital y a elegir adecuadamente la
formacin necesaria para ello.
978-84-695-8363-0
266
978-84-695-8363-0
267
Diseo de la investigacin
De acuerdo con los objetivos propuestos, el proceso de investigacin se estructura de la
siguiente forma:
Estudio de
casos
ENFOQUE CUALITATIVO
3. Seleccin de la muestra
4. Aplicacin del instrumento
5. Anlisis de los datos
5. Anlisis
de los datos
CONCLUSIONES FINALES Y FUTURAS LNEAS
DE TRABAJO
EN TORNO A LOS
PROGRAMAS DE CUALIFICACIN PROFESIONAL INICIAL
Contexto de estudio
Este estudio se ha desarrollado en un instituto pblico dependiente administrativamente de la
Consejera de Educacin de la Junta de Andaluca. Este centro se inaugur en el ao 1981
como un Centro de Formacin Profesional, que posteriormente, con la Ley Orgnica General
del Sistema Educativo (LOGSE, 1990) incluy la Educacin Secundaria en su oferta docente.
El instituto se encuentra localizado en una capital andaluza.
Colectivos implicados
De manera general, en la siguiente tabla se refleja informacin sobre los colectivos
implicados en este estudio:
978-84-695-8363-0
268
Tabla 1:
Distribucin de los informantes
TIPO
Estudiantes que cursan 1 de
PCPI(peluquera)
Estudiantes que cursan
Bachillerato(modalidades ciencias
sociales, humanidades, ciencias de la
salud y tecnolgico)
Estudiantes Ciclo formativo de grado
medio(Peluquera)
Estudiantes Ciclo formativo de grado
superior(Asesora de imagen personal)
Estudiantes Ciclo formativo de grado
superior (Laboratorio de diagnostico
Clnico)
Maestros generalistas PCPI
NUMERO
4
2
1
1
DISTRIBUCIN
POR SEXO
75% Mujeres
25% Hombres
PORCENTAJE
4,94%
41,98%
34
47,06% Mujeres
52,94% Hombres
10
60% Mujeres
40% Hombres
93,75% Mujeres
6,25% Hombres
63,63% Mujeres
36,36% Hombres
12,35%
50% Mujeres
50% Hombres
100% Mujeres
100% Hombre
100% Hombre
2,47%
16
11
2
19,75%
13,58%
2,47%
1,23%
1,23%
FUENTES DE
INFORMACIN
Normativa vigente sobre los
Programas de Cualificacin
Profesional Inicial
Director
Jefe del departamento de
Orientacin
Maestros generalistas PCPI
Tcnicos especialistas PCPI
Estudiantes de las distintas
modalidades de Bachillerato
Ciclos Formativos de Grado
Medio y Ciclos Formativos de
Grado Superior
TCNICAS/INSTRU
MENTOS DE
RECOGIDA DE
INFORMACIN
Anlisis normativo
Sistema de Categoras
Entrevista en
profundidad
Cuestionario
OBJETIVOS
978-84-695-8363-0
269
FUENTES DE
INFORMACIN
TCNICAS/INSTRU
MENTOS DE
RECOGIDA DE
INFORMACIN
Entrevista bibliogrfica
2.
3.
Para el anlisis de las entrevistas biogrficas nos hemos basado en las siguientes
categoras:
1. Infancia y Primera etapa escolar infantil, resaltando aspectos positivos,
negativos y experiencias personales que le quedan en la memoria.
2. Familia, composicin, condiciones de la vivienda (localizacin), situacin
cultural familiar, situacin socioeconmica familiar, existencia de problemas,
relacin familia centro e importancia que se le otorga a la educacin en el seno
familiar
3. Adolescencia y Segunda Etapa Escolar, experiencias personales y acadmicas,
problemticas
4. Etapa Escolar actual. Participacin en un Programa de Cualificacin
Profesional Inicial, razones y motivos para cursar un PCPI, expectativas,
satisfaccin con el PCPI, relacin con sus compaeros y el profesorado, aspectos
a mejorar del PCPI y planes de futuro
978-84-695-8363-0
270
Modalidad que se cursa dentro del nivel educativo es una respuesta abierta
978-84-695-8363-0
271
Conclusiones
Del estudio realizado sobre la Los Programas de Cualificacin Profesional Inicial: un
estudio de casos tras el anlisis de las informaciones cualitativas y cuantitativas se pueden
destacar las siguientes conclusiones:
Respecto al objetivo Caracterizar los Programas de Cualificacin Profesional
Inicial desde una perspectiva normativa hemos constatado que la ley restringe la
implantacin de los PCPI.
En relacin al objetivo Conocer qu supone para un centro la implementacin de
un PCPI desde la perspectiva del profesorado del mismo y desde el equipo educativo,
se considera necesaria una tipologa de profesor convencido y competente con la diversidad
que se presenta en las aulas, con experiencia, que le capacite para desenvolverse ante las
problemticas, que sea hbil en las ejecuciones y que tenga inters por la educacin y por los
estudiantes. Estos condicionantes hacen que la implementacin de un PCPI en un centro lleve
aparejada transformaciones en todos los niveles, aspecto por el cual muchos rehsan a ello.
Por su parte, en torno al objetivo Conocer la opinin y el conocimiento que de los
PCPI tienen los estudiantes de bachilleratos y ciclos formativos de Grado Medio y
Superior, hemos podido constatar el desconocimiento que otros discentes tienen del
potencial de los PCPI y que se podra extrapolar a la sociedad, en general. Resulta llamativo
como los estudiantes ms cercanos a los PCPI, en referencia al nivel educativo y profesional,
que son los estudiantes del Ciclo Formativo de Grado Medio de Auxiliar de Peluquera,
desconozcan en tan elevado porcentaje los supuestos metodolgicos de este programa y su
existencia.
Finalmente, en referencia al objetivo Caracterizar el contexto social, cultural y
acadmico de los alumnos/as de estos programas desde una perspectiva biogrficanarrativa, los estudiantes del PCPI destacan como una experiencia negativa su paso por la
Educacin Secundara Obligatoria, en contraposicin con su primera etapa escolar y la actual,
su paso por los Programas de Cualificacin Profesional Inicial, indicando que se encuentran
satisfechos con las enseanzas que se trabajan en los PCPI.
Por su parte, la historia que nos muestran estos alumnos/as en las entrevistas
biogrficas- narrativas y los mismos gerentes de estos programas, en las entrevistas en
profundidad es que estn sembradas de problemas familiares, sociales y culturales de gran
envergadura que han incidido en sus vidas y trayectorias escolares, generalmente, de modo
negativo.
En conclusin, hemos explorado desde todas las dimensiones que nos ha sido posibles,
dadas las limitaciones temporales y situacionales con las que contbamos, lo que implica
para un centro y para los distintos colectivos implicados en el mismo la puesta en marcha de
un PCPI, ya que este programa tiene unos planteamientos organizativos, metodolgicos que
muchas personas desconocen y su implementacin en un centro requiere mltiples
transformaciones en los centros que muchos no estn dispuestos a asumir. No obstante, a
pesar del trabajo que su desarrollo genera en los centros, las gratificaciones que se obtienen
son de un valor incalculable, para todos los agentes inmersos, destacando la oportunidad de
crecimiento holstico que se ofrece a unos estudiantes que se encontraban abatidos, dando
segundas oportunidades bien merecidas y aceptadas.
978-84-695-8363-0
272
Referencias
Aramendi, P., Vega, A. (2013). Los Programas de Cualificacin Profesional Inicial. La
perspectiva del alumnado del Pas Vasco. Revista de Educacin, 360.
http://www.revistaeducacion.mec.es/doi/360_122.pdf (Consultado 28 de agosto de 2012)
Buenda, L. y Berrocal, E. (2008). Evaluacin de un programa de formacin ocupacional para
la insercin laboral. Revista de Investigacin Educativa, 26 (1), 157-190.
Gil Flores, J., Garca, E. y Rodrguez, G. (1994). El anlisis de los datos obtenidos en la
investigacin. Mediante grupos de discusin. Revista Enseanza, 12, 183-199.
Gutirrez Prez, J. Pozo Llorente, M.T. y Fernndez Cano, A (2002) Los estudios de caso en
la lgica de la investigacin interpretativa. Revista Arbor: Ciencia, Pensamiento y
Cultura. Revista del Consejo Superior de Investigaciones Cientficas, 675, tomo
CLXXI.
Latorre, A., Del Rincn, D., y Arnal, J. (1996). Bases metodolgicas de la investigacin
educativa. Barcelona: GRAU
Marhuenda, F. (2006). Presentacin. La formacin para el empleo de jvenes sin graduado:
educacin, capitalizacin y socializacin para la insercin social. Revista de
Educacin, 341, 15-34.
Massot, I; Dorio, I, Y Sabariego, M (2004) Estrategias de recogida y anlisis de la informacin.
En R. Bisquerra (Coord). Metodologa de la Investigacin Evaluativa. Madrid: La
Muralla.
Miles, M.B. y Hubermann, A.M. (1994). Qualitative data analysis. An expanded sourcebook.
(2 ed.). Thousand Oaks: Sage.
Orden de 24 de junio de 2008, por la que se regulan los programas de cualificacin
profesional inicial (BOJA, 7 de Agosto de 2008).
Rodrguez Gmez, G.; Gil Flores, J. y Garca Jimnez, E.
investigacin Cualitativa. Mlaga: Ed. Aljibe.
(1997). Metodologa de la
Romero, S., lvarez Rojo, V., Garca Gmez, S., Gil Flores, J., Gutirrez Rodrguez, A., Seco,
M., Jan, A., Martn Padilla, A., Martnez del Rio, C., Molina Garca, L. y Santos, C.
(2012). El alumnado de formacin profesional inicial en Andalucia y sus necesidades de
orientacin: algunas aportaciones. Revista Espaola de Orientacin y Psicopedagoga,
23(2), 4-21.
Sandn, M. P. (2003). Investigacin cualitativa en educacin. Fundamentos y tradiciones.
Madrid: McGraw Hill.
Tjar, J. C. (2006). Investigacin cualitativa: comprender y actuar. Madrid: La Muralla.
978-84-695-8363-0
273
Vega, A., Aramendi, P. (2010). Entre el fracaso y la esperanza. Necesidades formativas del
alumnado de los Programas de Cualificacin Profesional Inicial. Educacin XXI, 13
(1), 39-63.
978-84-695-8363-0
274
Resumen
Con este nombre se presenta un proyecto en el que participan asociaciones, centros
educativos y de orientacin profesional para personas con discapacidad psquica y/o
trastornos mentales, de diferentes pases: Francia, Inglaterra, Holanda, Polonia, Grecia y
Espaa. Dicho proyecto est financiado por la Unin Europea, a travs del Programa de
Accin de Aprendizaje Permanente, cdigo 201-1-FR1-LEO04-24184. El objetivo principal
es la puesta en marcha de instrumentos que permitan la reinsercin profesional, teniendo en
cuenta la atencin y el apoyo de los adultos con discapacidad psquica, a lo largo de su
carrera profesional. Determinar por tanto, los medios necesarios para que esta
incorporacin sea efectiva, y que el apoyo a las personas con discapacidad psquica en el
mundo de trabajo sea eficaz.
Descriptores: discapacidad, orientacin laboral, evaluacin de necesidades, ayuda en el
puesto de trabajo.
Abstract
With this name presents a project involving associations, educational centers and vocational
guidance for people with mental disabilities and / or mental disorders, from different
countries: France, England, Holland, Poland, Greece and Spain. This project is funded by the
European Union through the Programme of Action Lifelong Learning 201-1 code-FR1LEO04-24184. The main objective is the implementation of tools for professional
reintegration, taking into account the care and support of adults with mental disabilities,
throughout his career. Determine those the means by which this incorporation and the
support for people with mental disabilities in the world of work to be effectives.
Keywords: intellectual disability, career counseling, needs assessment, support in job.
Introduccin
Partimos del presupuesto de que el desarrollo de las capacidades y las habilidades de
los individuos, tiene lugar en un determinado medio (interaccin persona situacin), y que
las personas se desempean sobre los recursos y estructuras del contexto. De ah que la
discapacidad no deba apreciarse desde una visin individual o intrasujeto (restriccin o
ausencia debida a una deficiencia), tal y como se estableca en la Clasificacin Internacional
978-84-695-8363-0
275
DIMENSIONES
Bienestar emocional
INDICADORES
Satisfaccin. Bienestar emocional. Autoconcepto.
Seguridad. Confianza. Felicidad.
Educacin. Desarrollo personal. Logro.
2.
Desarrollo personal.
3.
4.
Relaciones interpersonales.
Inclusin social.
5.
6.
Bienestar fsico.
Autodeterminacin.
7.
Bienestar material.
8.
Derechos.
978-84-695-8363-0
276
Frente a estos conceptos positivistas en el trato con las personal con discapacidad
psquica o bien con trastornos mentales, se desarrolla otro como el de estigma, que interfiere
de forma muy negativa en el empleador, quien puede dudar o negar la contratacin a una
persona con este tipo de discapacidad o situacin personal. Estos estigmas cursan de diversas
formas. Algunos ejemplos que se pueden mostrar son los siguientes:
Si yo empleo una persona con un estado de discapacidad psquica, me temo ...... Puede
ocasionar una crisis ... en la oficina:
Contrariamente a la creencia popular, las personas con discapacidad psquica rara vez
muestran violentos o presentan sntomas espectaculares. Esta disfuncin a menudo es
invisible. El riesgo de crisis es menos importante que en personas con buena salud. Sin
embargo, si se produce un problema, se puede responder con ms rapidez y apropiadamente si
la patologa es conocida.
La persona con una discapacidad psquica tiene en general un buen nivel de educacin y
formacin. Pero la patologa requiere que la persona realiza continuos esfuerzos para
adaptarse e interactuar con los dems. Por consiguiente, puede cansarse ms fcilmente, ser
ms emocional y por tanto, necesitan un ambiente tranquilizador de trabajo. La persona puede
necesitar accesorios personalizados para que su puesto sea adaptado a sus capacidades.
Que los documentos ... para ayudar a la contratacin son muy complicado:
Las empresas, tanto pblicas como privadas, con un determinado nmero trabajadores
(vara en funcin del Pas) estn obligadas a contratar a personas con discapacidad. Existen
ayudas financieras, materiales y servicios para facilitar la contratacin de dichos empleados,
su integracin y mantenimiento en el empleo.
En trminos generales, cuando una empresa integra a una persona con discapacidad, de
forma indirecta, todos los empleados se benefician de este enfoque racional de las condiciones
de trabajo y sus necesidades se comprenden mejor. La diferencia en este caso se convierte en
una riqueza y una oportunidad para la empresa.
Con estos postulados de principio, los diversos socios participantes, adoptaron desde su
prctica profesional, en relacin a esta poblacin, cules eran sus mtodos de trabajo y, sobre
todo qu recursos deberamos de desarrollar para cumplir con el objetivo del proyecto: la
creacin de instrumentos y recursos que permitan la reinsercin profesional, teniendo en
cuenta la atencin y el apoyo de los adultos con discapacidad psquica, a lo largo de su carrera
profesional. Determinar por tanto, los medios necesarios para que esta incorporacin sea
efectiva, y que el apoyo a las personas con discapacidad psquica en el mundo de trabajo sea
eficaz.
Mtodo
Las distintas reuniones transnacionales permitieron, desde su inicio, la puesta en
comn de las caractersticas de cada uno los socios participantes y su forma de operar con
978-84-695-8363-0
277
978-84-695-8363-0
Dimensin
Datos generales
Historia de Salud
Historia Educativa y Profesional
Aspectos afectivos y conductuales
Necesidades Especficas de Apoyo
para el Desempea Profesional
278
Nmero de tems
9
5
8
9
4
Se acompa dicho cuestionario con una Gua de Entrevista, cuyo principio se basaba
en que la entrevista deber centrarse en las necesidades de la persona y sus circunstancias
individuales y sociales, dentro de las cuales est la discapacidad y sus limitaciones de
capacidades en la realizacin de funciones o actividades. Este principio regulador, basado
igualmente en las aportaciones de Rogers (1972) para crear una relacin autntica de ayuda y
en los modelos de entrevistas motivacionales (Rollnics y Mille, 1996; Lizrraga y Ayarra,
2001), se concret en una serie de recomendaciones prcticas a considerar por el entrevistador
(tabla 1).
Tabla 1
Aspectos prcticos de la Entrevista
978-84-695-8363-0
279
Debilidades:
978-84-695-8363-0
280
Lizarraga, S. y Ayarra, M. (2001). Entrevista Motivacional. En Anales Sis San Navarra. Vol.
24, Suplemento 2.
Luque Parra, D. J. (2011). Consideraciones psicolgicas en la valoracin educativa de la
discapacidad intelectual. Revista RUEDES de la Red Universitaria de Educacin
Especial, 1, 97-108. URL: http://bdigital.uncu.edu.ar/fichas.php?idobjeto=3597.
Consultado 10/05/11.
Luque, D. J. (2007). Evaluacin de aspectos de personalidad y de adaptacin: Entrevista
semiestructurada. Materiales de clase. Mlaga: Facultad de Ciencias de la Educacin.
Luque, D. J., y Rodrguez, G. (2008). Alumnado Universitario con Discapacidad: Elementos
para la reflexin psicopedaggica. Revista Espaola de Orientacin y
Psicopedagoga, 19(3), 270 - 281.
Rogers, C. (1972). El proceso de convertirse en persona. Barcelona: Paidos.
Rollnic, S y Mille, W.R. (1996). Qu es la entrevista motivacional? RET, Revista de
Toxicomanas, 6.
Thompson, J. R.; Bryant, B. R.; Campbell, E. M.; Craig, E. M.; Hughes, C.M.; Rotholz, D.
A.; Schalock, R. L.; Silverman, W. P.; Tass, M. J.; Wehmeyer, M. L. (2004). SIS.
Escala de Intensidad de apoyos. American Association of Mental Retardation
(AAMR). Adaptacin espaola de Miguel ngel Verdugo, Benito Arias y Alba Ibez
(2007) INICO. Universidad de Salamanca.
978-84-695-8363-0
281
Resumen
Durante los ltimos aos se ha incrementado de forma espectacular en nuestro pas el
nmero de adopciones, especialmente debido al desarrollo de la adopcin internacional,
fenmeno que nos puesto a la cabeza de las adopciones internacionales a nivel mundial. Este
rpido crecimiento nos ha cogido desprevenidos y los diferentes sistemas de atencin a la
infancia, y, especialmente, el educativo, se encuentran con dificultades para adaptarse a esa
nueva realidad. En este trabajo se presentan algunas evidencias detectadas en dos
investigaciones realizadas por las autoras con menores adoptados tanto en Espaa como en
el extranjero y se concluye sobre las posibles dificultades de adaptacin de estos menores al
mbito escolar como consecuencia de las secuelas de sus experiencias previas as como del
tremendo esfuerzo que estos menores deben realizar para adaptarse a estos nuevos entornos,
especialmente cuando provienen de otros pases. Igualmente se sealan posibles estrategias
para su abordaje.
Descriptores: adopcin, escuela, integracin escolar.
Abstract
During the last years the number of adoptions has increased espectaculary in our country,
especially with the development of international adoption, a phenomenon that it put us at the
head of international adoptions worldwide. This rapid growth has caught us unawares and
the different systems of care for children, and especially educational, encounter difficulties to
adapt to this new reality. In this paper we present some evidence detected in the studies by the
authors about children adopted in Spain and abroad and it concludes on the possible
difficulties of adaptation of these children to the school environment as a result of their
previous experiences and the tremendous effort that these children should be made to adapt to
these new environments, especially when they come from other countries. It also identifies
possible strategies to address.
Keywords: adoption, school, school integration.
Introduccin
La adopcin supone una nueva oportunidad para muchos menores que nacen en
contextos adversos donde sus familias no les atienden de forma adecuada y donde, en
ocasiones, se ven abocados a situaciones de maltrato o abandono que pueden dejar secuelas en
su desarrollo psicosocial. La adversidad inicial y sus repercusiones pueden resultar un
obstculo en la adaptacin de estos menores a su nuevo entorno familiar, social, y tambin el
978-84-695-8363-0
282
escolar (Beckett et al., 2006; Dalen, 2007; Gindis, 2000; Van Ijzendoorn, Juffer, y Phoelhuis,
2005; Lindblad, Dalen, Rasmussen, Vinnerljung y Hjern, 2009; Palacios, Snchez-Sandoval y
Len, 2005; Vinnerljung, Lindblad, Hjern, Rasmussen, y Dalen, 2010). De hecho, numerosas
investigaciones sealan que los adoptados, tanto si han sido adoptados en Espaa (Palacios y
Snchez, 1996) como en el extranjero (Beckett et al., 2007; Dalen, 2007; van Ijzendoorn et
al., 2005; Lindblad, et al., 2009; Palacios, et al., 2005; Reinoso y Forns, 2011; Vinnerljung, et
al.; Wilk, et al., 2011; Vaugelade, Duyme y Fichcott, 2008), al compararlos con sus iguales
en la escuela, tienden a presentar mayores retrasos en su rendimiento escolar y en las
habilidades lingsticas, y a desarrollar problemas de aprendizaje. Aproximadamente la mitad
de ellos necesitan apoyo escolar durante los 2 o 4 primeros aos de escolarizacin tras la
adopcin (Gindis, 1998; Judge, 2004, Palacios et al., 2005).
En aquellos estudios en los que se comparan adoptados nacionales e internacionales,
los adoptados internacionales suelen presentar peores logros que los adoptados en el propio
pas (Beckett et al., 2007; Dalen, 2007; Lindblad, et al., 2009; Palacios et al., 2005), con
excepciones que parecen derivar del pas de procedencia (Vaugelade et al., 2008;
Vinnerljung, et al., 2010). Estos obstculos estaran relacionados con su procedencia de
entornos educativos desfavorecidos, la falta de estimulacin, y, si nacieron en otro pas, el
desconocimiento del lenguaje, los hbitos y las costumbres socialmente aceptados en su
nuevo entorno (Berstegui, 2006).
La investigacin sugiere que estas dificultades pueden tener que ver con un Dficit
cognitivo acumulado, trmino acuado por Deutsch en los aos 60 (Cox, 1983) y llevado al
estudio de los menores adoptados por Gindis (2000, 2006) para explicar este desfase,
consecuencia de las carencias sufridas por menores que crecieron en entornos desfavorecidos
y que no han desarrollado las habilidades cognitivas adecuadas para su edad. En la misma
lnea se pronuncian autores como Groza, Ryan y Thomas (2008) o Merz y McCall (2011)
cuando hablan del Dficit en la funcin ejecutiva que afecta a una serie de habilidades
cognitivas y de acciones que involucran la capacidad para manipular la informacin y de
concentrarse en una tarea especfica (Rabbitt, 1997). Sus hallazgos sugieren que la privacin
psicosocial temprana puede aumentar el riesgo de sufrir dficits en la funcin ejecutiva que
tienen un reflejo directo en la adaptacin escolar y que se manifiestan especialmente en los
menores que fueron adoptados ms mayores. De hecho, numerosos estudios realizados con
menores adoptados (Dalen, 2007; Decker y Omori, 2009; Juffer y Van IJzendoorn, 2005;
Howe, 1997; Rutter, 1985; Tan, 2009; van IJzendoorn et al., 2005) sealan la edad de
adopcin como una variable significativa para el xito en el proceso de integracin escolar.
Esta variable tiene que ver con la historia previa del menor ya que cuanto ms tarde llegue
este a los servicios de proteccin ms tiempo puede haber estado expuesto a situaciones
adversas, ms largo puede haber sido el periodo en el que ha permanecido institucionalizado,
etc., existiendo numerosas evidencias del efecto negativo en el desarrollo cognitivo de los
nios de la falta de cuidados en la infancia (Gindis, 2005; Grantham-McGregor, 1995;
McGuiness y Pallansch, 2000; Miller, 2000; Mitchel, 2001). El tiempo que los menores
pasaron institucionalizados tambin ha mostrado en numerosos trabajos su influencia en los
logros acadmicos de los menores adoptados (Beckett et al., 2006; Judge, 2004; Zeanah, et
al., 2003).
El objetivo de este trabajo es aunar los resultados obtenidos en dos trabajos realizados
por las autoras con menores adoptados espaoles, respecto a su ajuste escolar y el peso de
determinadas variables como la edad de adopcin y el tiempo de institucionalizacin, en las
dificultades encontradas, de cara a sensibilizar a la comunidad educativa sobre un fenmeno
978-84-695-8363-0
283
relativamente nuevo en nuestro pas que requiere de una reflexin sobre su abordaje desde las
instituciones educativas y las familias.
Mtodo
Participantes
En conjunto, se han estudiado 224 casos de menores adoptados. Por una parte se
estudi una muestra de 91 menores adoptados. El 45% eran chicos y el 55% chicas. El
34,31% (n=35) procedan de una adopcin nacional y el 65.69% (n=67) de adopcin
internacional. El segundo trabajo ha sido realizado con 57 adoptados nacionales, de entre 2 y
12 aos. El 48% eran chicos y el 52% chicas.
Instrumentos
- Autoinforme de datos personales: Recoge los principales datos socio-demogrficos de la
familia y del menor adoptado; el tipo de cuidados previos a la adopcin y antecedentes
conocidos de la atencin recibida hasta la adopcin.
- Escala para la deteccin de problemas en menores adoptados (Fernndez y Fuentes,
2000). La escala consta de 40 tems, divididos en 4 reas: aspectos relacionados con la
salud y el desarrollo fsico, sobre el desarrollo cognitivo-lingstico y el ajuste escolar,
sobre el desarrollo afectivo y emocional y sobre el establecimiento de relaciones sociales y
asuncin de normas. Las familias deban sealar si haban detectado determinados
problemas en sus hijos al inicio de la convivencia y si estos persistan en el momento del
estudio.
- Escala de integracin escolar (Berstegui, 2005). Esta escala mide el grado en el que, a
juicio de la familia, se ha logrado la integracin escolar del menor explorando seis reas
especficas (adaptacin escolar, aprendizajes bsicos, resultados escolares, relaciones con
profesores, relaciones con compaeros, integracin social y actitud en el aula). Para cada
uno de estos tems hay tres opciones de respuesta: buena (no se perciben dificultades), en
proceso (se perciben dificultades que han empezado a mejorar) y con dificultades (se
perciben dificultades sin una mejora evidente). El total de la escala es el resultado de la
suma de las puntuaciones en todos los ndices. Puntuaciones ms altas en la escala indican
una mejor integracin escolar.
Anlisis de los datos
Tras el anlisis de los descriptivos, frecuencias y porcentajes, se realiza un anlisis de
las correlaciones entre las diferentes reas de integracin escolar y las variables edad de
adopcin, tiempo de institucionalizacin, y en uno de los estudios, lugar de procedencia.
Finalmente, en algn caso se realiza el contraste de hiptesis mediante pruebas no
paramtricas (Prueba de Kruskal-Wallis).
Resultados
Uno de los estudios (Berstegui y Rosser, 2012), realizado con 91 menores adoptados
nacional e internacionalmente, muestra que aproximadamente una de cada cinco familias
adoptivas perciba dificultades tanto en los resultados escolares de sus hijos como en su
978-84-695-8363-0
284
actitud en el aula. En general, los padres consideran que los menores adoptados se han
adaptado bien a la escuela, alcanzando en el ndice total de integracin escolar, expresado
segn tres rangos (1: con dificultades; 2: en proceso; y 3: buena), una media de 2,60 con una
desviacin tpica de 0,61. Atendiendo a los diferentes ndices de integracin escolar
estudiados (tabla 1) ms del 80% de los menores se encontraran en el rango de buena
adaptacin. Sin embargo, entre un 6,6% y un 20% segn el rea an no han logrado una
buena adaptacin, especialmente en los resultados escolares obtenidos (19,8%) y en la actitud
en el aula (17,8%).
Tabla 1
Integracin escolar
con dificultades
Adap..
escolar
4.4%
Aprend.
bsicos
8.8%
Resultados
escolares
13,2%
Rels. con
compaeros
5.5%
Rels. con
profesores
4.4%
Integr.
social
2.2%
actitud
aula
8.9%
en proceso
4.4%
7.7%
6.6%
2.2%
2.2%
6.6%
8.9%
buena
91.1%
83.5%
80.2%
92.3%
93.3%
91.2%
82.2%
Por su parte, en el siguiente estudio (Rosser y Suri, 2012), realizado con en una
muestra de 57 menores adoptados nacionales, aparecen problemas relacionados con su
desarrollo cognitivo y lingstico y su ajuste escolar en el 33% de los casos (Tabla 2). Los
menores, a su llegada a la nueva familia, presentaban en un porcentaje importante, retrasos en
el desarrollo del lenguaje, expresados por una pobreza de vocabulario o trastornos en la
articulacin. Igualmente manifestaban retraso en los conocimientos adquiridos,
probablemente fruto de la falta de estimulacin, la asistencia irregular a la escuela, etc. con un
retraso de uno o ms cursos escolares, as como dificultad para organizarse las tareas y para
prestar atencin en clase, lo que les generaba, consiguientemente, ansiedad ante la realizacin
de las tareas escolares o la propia asistencia al centro, pereza o nerviosismo. Adems, las
autoras sealaban que gran parte de estos problemas persistan en el momento del estudio, tras
con una media de cuatro aos y medio de convivencia con sus familias adoptivas.
Tabla 2
Resultados de la Escala de deteccin de problemas infantiles. Fernndez y Fuentes, 2000
Bloque: Desarrollo cognitivo-lingstico y ajuste escolar
Pronunciacin deficiente, dislalias.
Falta de lxico, desconocimiento de palabras.
Retraso escolar de uno o ms cursos.
Ansiedad ante las tareas escolares, pereza, nerviosismo.
% Aparicin
29.3
40.2
30.9
38.8
% Persistencia
7.3
12
20
29.6
En ambos estudios comprobamos como, las variables que tienen que ver con las
experiencias previas de los menores guardan relacin con el grado de dificultades en su
integracin escolar.
En el trabajo de Rosser y Suri (2012) la edad a la que los menores llegaron a su nueva
familia era la variable que manifestaba una relacin ms clara con la presencia inicial y con
la persistencia de estos problemas (tabla 3). Los menores que fueron adoptados con ms de 2
aos de edad presentaban ms problemas de este tipo a su llegada a la nueva familia: un
lenguaje ms pobre para su edad cronolgica y dificultades en su articulacin, retraso escolar
978-84-695-8363-0
285
y dificultades para seguir el ritmo de sus compaeros. Igualmente, es en este grupo donde se
manifestaba una persistencia de estos problemas en el momento del estudio.
El tiempo de institucionalizacin tambin haba tenido un peso significativo tanto en la
aparicin como en la persistencia de estos problemas (tabla 3).
Tabla 3
Relacin entre los antecedentes del menor y la aparicin y persistencia de problemas cognitivos y de
ajuste escolar durante el periodo de adaptacin
Aparicin
Persistencia
Tiempo internamiento
X2
13,005
gl
4
Sig. asint
,011
X2
14,352
gl
4
Sig. Asint
,006
22,552
.000
12,995
.001
a.
b.
Tiempo institucionalizado
rxy
rho
Integracin escolar
-,408***
-,432(***)
adaptacin escolar
-,360**
-,290(*)
aprendizajes bsicos
-,317**
-,389(**)
resultados escolares
-,336**
-,472(***)
-,352**
-,181
-,196
-,015
integracin social
-,236*
-,197
actitud en el aula
-,239*
-,213
*** La correlacin es significativa al nivel 0,000 (bilateral). ** La correlacin es significativa al nivel 0,01 (bilateral). * La
correlacin es significativa al nivel 0,05 (bilateral)
En este caso, controlando la edad actual de los menores (tabla 4), la edad de adopcin
correlaciona de forma inversa tanto con la puntuacin total en integracin escolar (r xy=.408**) como con todos y cada uno de sus ndices. Cuanto ms pequeos fueron adoptados
los nios y nias de la muestra mejor adaptacin presentan en el mbito escolar, en todos los
aspectos evaluados, con diferencias estadsticamente significativas en ajuste escolar (rxy = ,360**), aprendizajes bsicos (r xy = -,317**), resultados escolares (r xy = -,336**), relaciones
con compaeros (rxy = -,352**), integracin social (r xy = -,236*), y actitud en el aula. (rxy = ,239*), es decir con todos los ndices de integracin escolar excepto con la relacin con los
profesores.
978-84-695-8363-0
286
Amrica Latina
Desv.
Media
tp.
Asia
Desv.
Media
tp.
Pases este
Desv.
Media
tp.
gl
Sig.
asintt.
adaptacin escolar
2,91
,390
2,43
,976
3,00
,000
2,81
,512
8,123
,044
aprendizajes bsicos
2,73
,674
2,57
,787
2,97
,186
2,57
,746
6,717
,082
resultados escolares
2,64
,783
2,43
,976
2,90
,409
2,52
,750
5,525
,137
2,91
,384
3,00
,000
3,00
,000
2,57
,811
10,728
,013
2,94
,348
2,86
,378
3,00
,000
2,67
,730
8,454
,038
integracin social
2,91
,384
2,86
,378
2,97
,186
2,76
,539
4,230
,238
actitud en el aula
2,91
,384
2,71
,488
2,93
,258
2,19
,928
19,916
,000
2,73
,51
2,57
,78
2,86
,35
2,14
,65
9,683
,008
Discusin
Los trabajos descritos en este artculo, realizados con el objetivo de conocer la
situacin de los menores adoptados en diferentes mbitos de su desarrollo psicosocial, han
sido trados a este foro porque coinciden de forma llamativa en sus conclusiones y evidencian
la presencia de dificultades en la integracin escolar de los menores adoptados as como la
influencia de determinadas variables relacionadas con este desajuste como el tiempo
trascurrido hasta su adopcin (edad de adopcin) y ms en concreto, el tiempo transcurrido en
instituciones (tiempo de institucionalizacin).
Aun cuando los datos forman parte de investigaciones distintas con instrumentos de
evaluacin distintos, merecen un tratamiento conjunto de cara a poner de manifiesto la
existencia de una nueva realidad en la escuela que requiere de un esfuerzo importante de
adaptacin para todos los implicados.
Como seala Mjica (2011) a menudo los menores adoptados son nios ms
inmaduros, con carencias significativas en su proceso de aprendizaje, que han sido menos
estimulados en su primera infancia y presentan disarmonas en diferentes reas, menos
autonoma para afrontar los retos y tareas, menos autocontrol y capacidad de regulacin
978-84-695-8363-0
287
978-84-695-8363-0
288
978-84-695-8363-0
289
Merz, E.C. y McCall, R.B. (2011). Parent Ratings of Executive Functioning in Children
Adopted from Psychosocially Depriving Institutions. Journal of Child Psychology
Psychiatry, 52(5), 537546.
Miller, L.C. (2000). Initial assessment of growth, development, and effects of
institutionalization in internationally adopted children. Pediatric Annals, 29(4), 224232.
Mitchell, K.T. (2001). Fetal alcohol syndrom and other alcohol related birth defects:
Identification and implications. The Nadd Bulletin, 4(1), 11-14.
Mjica, J. (2011). Hacia una escuela inclusiva: el reto de integrar nios y nias adoptados.
Seminario ASTURIADOP. Gijn, 14 de mayo de 2011.
Palacios, J. y Brodzinsky, D.M. (2010). Review: Adoption research: Trends, topics,
outcomes. International Journal of Behavioral Development , 34(3), 270-284.
Palacios, J. y Snchez, Y. (1996). Nios adoptados y no adoptados: un estudio comparativo.
Anuario de Psicologa, 1, 63-85.
Palacios, J., Snchez-Sandoval, Y. y Len, E. (2005). Adopcin Internacional en Espaa: un
nuevo pas, una nueva vida. Madrid: Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales.
Rabbitt, P. (Ed.). (1997). Methodology of frontal and executive function. East Sussex:
Psychology Press
Rosser, A. y Suri, R. (2012). La adaptacin escolar de los menores adoptados. Riesgos y
estrategias de prevencin. Electronic journal of research in educational psychology,
10(1), 151-170.
Rutter, M. (1985) Family and school influences on cognitive development. Journal of Child
Psychology and Psychiatry, 26(5), 683704.
Tan, T.X. (2009). School-Age Adopted Chinese Girls' Behavioral Adjustment, Academic
Performance, and Social Skills: Longitudinal Results. American Journal of
Orthopsychiatry, 79(2), 244-251.
Vaugelade, J., Duyme, M. y Fichcott, D. (2008). La scolarit des enfants adopts compare
celle des non adopts. Neuropsyquiatrie de lenfance et ladolescence, 56, 455-460.
Van IJzendoorn, M.H., Juffer, F. y Poelhuis, C.W. (2005). Adoption and cognitive
development: A metaanalytic comparison of adopted and nonadopted children's IQ
and school performances. Psychological Bulletin, 131, 301-316.
Vinnerlung, B., Lindblad, F., Hjern, A., Rasmussen, F. y Dalen, M. (2010). School
performance at age 16 among international adoptees: A Swedish national cohort study.
International social work, 53(4), 510-527.
Wilk, K.L., Loman, M.M., Van Ryzin, M.J., Armstrong, J.M., Essex, M.J., Polak, S.D. y
Gunnar, M.R. (2011). Behavioral and emotional symptoms of post-institutionalized
978-84-695-8363-0
290
children in middle chilhood, Journal of child psychology and psychiatry and allied
disciplines, 52(1), 56-63.
Zeanah, C.H., Nelson, C.A., Fox, N.A., Smyke, A.T, Marshall, P. Parker, S.W. y Koga, S.
(2003). Designing research to study the effects of institutionalization on brain and
behavioural development: The Bucharest Early Intervention Project. Development and
Psychopathology, 15, 885-907.
978-84-695-8363-0
291
Ramn Garca Perales, CEIP Nuestra Seora del Rosario, Helln (Albacete)
Email contacto: [email protected]
Resumen
Los procesos de identificacin de las capacidades superiores de los alumnos deberan ser
considerados como una funcin ms de la prctica docente. Una de las tareas fundamentales
de un educador de cualquier etapa educativa, es la accin tutorial y la orientacin de su
grupo de alumnos. En consecuencia, es un deber para l y un derecho para el alumno,
ofrecer respuestas educativas ajustadas y adaptadas a las particularidades, fortalezas y
debilidades de los escolares. Previamente a los procesos de intervencin educativa, resulta
fundamental desarrollar un proceso de diagnstico individualizado que favorezca un
conocimiento exhaustivo del alumno. Un aspecto esencial en esta labor de identificacin, es
el conocimiento y aplicacin de la legislacin autonmica referente a esta cuestin, en este
caso de la Comunidad Valenciana, y su relacin con el resto de marcos normativos
nacionales. La deteccin de las potencialidades de los alumnos facilita su respuesta
educativa.
Descriptores: Diagnstico educativo, Polticas de educacin, Caractersticas individuales,
Competencias del profesor y alta capacidad.
Abstract
The processes of identification of the superior capacities of the students should be considered
as a function more than the educational practice. One of the fundamental tasks of an educator
of any educational stage, is the action tutorial and the orientation of their group of students.
In consequence, it is a duty for him and a right for the student, to offer adjusted educational
answers and adapted to the particularities, strengths and the scholars' weaknesses.
Previously to the processes of educational intervention, it is fundamental to develop a process
of individualized diagnosis him to favor the student's exhaustive knowledge. An essential
aspect in this identification work, is the knowledge and application of the autonomous
legislation with respect to this question, in this case of the Comunidad Valenciana, and its
relationship with the rest of national normative marks. The detection of the potentialities of
the students facilitates its educational answer.
Keywords: Educational diagnosis, Politics of education, Individual characteristics, Teacher
competencies and academically gifted.
978-84-695-8363-0
292
Introduccin
La identificacin de alumnos con alta capacidad debera ser una oportunidad para
ofrecer al alumno una respuesta educativa individualizada y personalizada, considerada desde
la perspectiva de educar en la diversidad y orientada a desarrollar todas las potencialidades de
un escolar. Con independencia de la edad que tenga el alumno, cuando se habla
educativamente del concepto de alta capacidad se debe hacer referencia necesariamente a dos
procesos fuertemente vinculados e interrelacionados:
a) Un proceso de identificacin, propiamente dicho, que implica deteccin y evaluacin
desde distintas vas de actuacin para poder contemplar el mayor nmero posible de
variables de excepcionalidad.
b) Un proceso de intervencin educativa dirigido a desarrollar sus potencialidades con
independencia del sexo y la clase social y cultural de procedencia.
En los procesos de deteccin, es el tutor del alumno el primer agente diagnstico.
Como profesional que ms tiempo pasa con el alumno en el entorno escolar y en estrecha
coordinacin con el contexto familiar, conforma la base del inicio del proceso de
identificacin. Una vez cumplimentada la hoja de derivacin por parte del tutor, pasa a
intervenir de manera especializada el orientador del centro. En el actual sistema educativo
espaol, son los servicios de orientacin educativa que atienden a los centros docentes los que
tienen la competencia de evaluar y determinar de manera formal si un alumno tiene
necesidades educativas especficas de apoyo educativo asociadas a condiciones personales de
sobredotacin intelectual. Los principios de la orientacin educativa son tres: prevencin,
desarrollo e intervencin social.
Orientacin
Educativa
Prevencin
Desarrollo
Intervencin Social
978-84-695-8363-0
293
No se observan necesidades
educativas especficas de
apoyo educativo
Se observan
necesidades educativas
especficas de apoyo educativo
Respuesta educativa
individualizada
978-84-695-8363-0
294
para dar a esta temtica la importancia que merece. A finales de la dcada de los noventa, se
produjo en nuestro pas un impulso fundamental sobre este tema que sirvi como base para su
generalizacin a las Comunidades Autnomas. Una vez esbozada la normativa nacional, la
mayora de las regiones comenzaron un esfuerzo legislativo para ajustar lo establecido a nivel
nacional a su comunidad a nivel particular. Los principales marcos nacionales regulados sobre
la alta capacidad, tanto en relacin al diagnstico como a la intervencin educativa, fueron los
siguientes:
Real Decreto 943/2003, de 18 de julio, por el que se establecen las condiciones para
flexibilizar la duracin de los diversos niveles y etapas del sistema educativo para los
alumnos superdotados intelectualmente.
978-84-695-8363-0
295
regin. En este marco normativo, se fijan las medidas y destinatarios de la evaluacin, los
requisitos y condiciones para la flexibilizacin, el desarrollo en los niveles no obligatorios, el
proceso de deteccin y el procedimiento de aceleracin, la forma de desarrollar la evaluacin
psicopedaggica y el registro de medidas de flexibilizacin y seguimiento. Aunque no est
considerada como legislacin especfica de alta capacidad, la Comunidad Valenciana cuenta
tambin con una serie de decretos y rdenes que regulan de manera general la respuesta
educativa a los alumnos con necesidades educativas de cualquier tipo. En ellas, se sealan
criterios generales de atencin a la diversidad, modelo de informe psicopedaggico y algunos
aspectos en relacin a la alta capacidad como, por ejemplo, criterios para la realizacin de
adaptaciones curriculares, medidas de flexibilizacin curricular y respuesta educativa.
Por otro lado, Canarias es una de las Comunidades Autnomas con un marco ms
reciente. En este sentido, sealar la Orden 22-07-2005 por la que se regula la atencin
educativa, las medidas y los criterios de identificacin e intervencin educativa para los
alumnos con altas capacidades. Adems, en la Resolucin 21-12-2005 se fijan los
procedimientos y plazos que regulan la atencin educativa de estos alumnos. Los aspectos
fundamentales de estos marcos normativos son: el proceso de deteccin temprana y
evaluacin psicopedaggica, el procedimiento y desarrollo del informe psicopedaggico, los
aspectos formales y de tramitacin de dicho informe, el informe psicopedaggico procedente
de otras CC.AA., la actualizacin de los informes psicopedaggicos, las medidas educativas
(ordinarias, extraordinarias y excepcionales), el procedimiento para solicitar la flexibilizacin
y el adelanto de reas, el procedimiento para la flexibilizacin de enseanza de msica e
idiomas, el registro y las reglas de aplicacin e interpretacin y una serie de anexos para
completar todo el proceso. A partir de esta normativa, Canarias realiza un trabajo con este
alumnado tremendamente innovador en lo que a diagnstico e intervencin educativa se
refiere y que constituye una propuesta novedosa en nuestro pas por la especificidad de
algunos de sus contenidos, entre los que podemos mencionar los siguientes:
(a) En el primero de Educacin Primaria realizan una deteccin inicial generalizada a
travs de escalas dirigidas al profesorado y a las familias. Se les facilita un "Dossier
de Protocolos para la deteccin, seguimiento e intervencin" para encontrar indicios
sobre la posibilidad de encontrar altas capacidades para luego confirmarlas mediante
pruebas de tipo cognitivo. Tanto si se corrobora la presencia de la precocidad como en
caso contrario, se hace un "Informe sobre la deteccin de la precocidad intelectual".
(b) Cuando se inicia la evaluacin psicopedaggica y los resultados no confirman la
existencia de alta capacidad, no se aplican ms pruebas y las conclusiones se recogen
en el "Informe preliminar sobre la identificacin de altas capacidades intelectuales".
(c) En su legislacin se define e incorpora la distincin entre los conceptos de precocidad,
sobredotacin, superdotacin y talento.
(d) Establece la bsqueda de informacin como la metodologa ms adecuada para la
intervencin educativa. Se consideran como mtodos ms adecuados los indirectos o
poco estructurados dirigidos al descubrimiento y al trabajo autnomo, el desarrollo de
habilidades para aprender a pensar, la resolucin creativa de problemas y el dominio
de distintos campos de investigacin.
(e) Distingue entre adaptaciones curriculares individuales de enriquecimiento (ACIE) y
de ampliacin vertical (ACIAV). Las primeras son modificaciones en la programacin
978-84-695-8363-0
296
978-84-695-8363-0
297
Tabla 1
Alumnos con alta capacidad en Comunidad Valenciana, Canarias y en el conjunto de Espaa
CC. AA.
Curso 2010/2011
N total de
alumnos
Comunidad Valenciana
Canarias
Espaa
821.691
348.998
7.782.182
%
0,03
0,25
0,09
N total de
alumnos
1.565.732
207.303
130.802
172.900
348.998
86.566
356.566
368.408
1.261.346
821.691
179.754
378.601
1.093.868
277.328
1.502
97
219
324
872
94
371
228
152
274
116
536
1.150
578
0,1
0,05
0,17
0,19
0,25
0,11
0,1
0,06
0,01
0,03
0,06
0,14
0,11
0,21
Navarra
Pas Vasco
La Rioja
Ceuta
Melilla
Espaa
978-84-695-8363-0
100.888
345.734
49.801
17.817
18.079
7.782.182
130
129
57
4
1
6.834
298
0,13
0,04
0,11
0,02
0,01
0,09
978-84-695-8363-0
299
porcentajes son superiores a comunidades que s que los tienen. Por otro lado, el desarrollar
actuaciones ms all de lo puramente normativo, s que parece hacer notar el aumento de los
casos detectados tal y como ocurre en comunidades como es el caso de Canarias o Murcia
(realizacin de evaluaciones censales, existencia de equipos especficos de atencin a la alta
capacidad, programas de enriquecimiento, asociacionismo y trabajo con familias, etc.).
Los marcos normativos deberan de dar una mayor importancia a la generalizacin de
evaluaciones grupales que permitan el acercamiento al conocimiento de las potencialidades de
cada alumno. Una vez realizadas estas administraciones grupales, la evaluacin
psicopedaggica de aquellos alumnos con puntuaciones ms elevadas, debera ser un proceso
valioso centrado tanto en la persona como en el contexto que rodea al sujeto, con el objetivo
de conocer sus fortalezas y debilidades y facilitar la respuesta educativa ajustada para cada
alumno segn las necesidades manifestadas e identificadas. Esta tarea no es exclusiva del
orientador que trabaja en el centro sino que debera recaer tambin en todo el profesorado que
atiende al alumno, en la familia y apoyado, todo ello, en las percepciones observadas por su
grupo de iguales. En este sentido, la existencia generalizada en todo el territorio nacional de
equipos especficos de atencin a la alta capacidad podra ser una alternativa interesante.
Todo este proceso requiere del compromiso firme de la Administracin Educativa con
el objetivo de unificar criterios, mantener las medidas reguladas a travs de la legislacin,
supervisar los procesos de flexibilizacin, clarificar el concepto de alta capacidad, fijar
medidas especficas de respuesta educativa, etc. Adems, se debe tener claro que son procesos
largos y complejos por lo que hay que evitar el desnimo y el desistir en ofrecer a estos nios
aquello que precisan, disminuir en lo posible los trmites burocrticos para lograr lo antes
posible el ajuste de la respuesta educativa, tomar al docente como el precursor del proceso de
deteccin por lo que su formacin sobre el tema debera ser la adecuada, iniciar estos
procesos de diagnstico e intervencin en edades tempranas y tener en cuenta la distincin
entre precocidad, alta capacidad, talento simple y mltiple.
Referencias
Jimnez, C & Garca, R. (2013). Los alumnos ms capaces en Espaa. Normativa e incidencia
en el diagnstico y la educacin. Revista Espaola de Orientacin y Psicopedagoga,
24(1), 7-24.
Jimnez, C. (2010). Diagnstico y educacin de los ms capaces. Madrid: Editorial Pearson.
Lpez, B., Beltrn, M.T., Lpez, B. y Chicharro, D. (2000). Alumnos precoces, superdotados
y de altas capacidades. Madrid: Centro de Investigacin y Desarrollo Educativo.
MEC
(2013).
Datos
estadsticos.
<http://www.educacion.gob.es/horizontales/ministerio.html>
29/04/2013
Disponible
Fecha
de
en
consulta
MEC
(2013).
Datos
estadsticos.
Disponible
<http://www.mec.es/universidades/estadsticas> Fecha de consulta 29/04/2013.
en
MEC
(2013).
Enlaces
Comunidades
Autnomas.
Disponible
<http://www.educacion.gob.es/educacion/comunidades-autonomas/tu-comunidadautonoma.html> Fecha de consulta 29/04/2013.
en
978-84-695-8363-0
300
978-84-695-8363-0
301
Resumen
Hemos realizado un estudio con la base de datos utilizada para el desarrollo del test T.D.E.
(Test de Desarrollo Emocional), Forma B; aplicado a 476 escolares de Secundaria (E.S.O.).
Del anlisis cualitativo de las respuestas, stas han revelado una tipologa diferente, segn
los adolescentes hayan entendido o no la pregunta que se les haca. Entre esa tipologa se
han detectado (segn el tipo de respuesta) 6 categoras: sentimientos/emociones, estados de
nimo, valores tico/morales, estados fisiolgico/viscerales, experiencias cognitivas y
palabras comodn. Con respecto a la correccin o no de las respuestas, se han
considerado en este caso 4 categoras: sustantivos, participios/adjetivos, infinitivos, estmulos
desencadenantes (situaciones, objetos). Como resultado de este anlisis cualitativo se han
encontrado distribuciones de frecuencias jerarquizadas por orden, que nos dan un ndice de
qu emociones/sentimientos son ms populares.
Descriptores: Desarrollo emocional; Educacin emocional; Vocabulario emocional; Afectos
y educacin.
Abstract
We conducted a study with the database used for the development of TDE test (Test of
Emotional Development), Form B; 476 applied to secondary school (E.S.O.). A qualitative
analysis of the responses, they have revealed a different type, as adolescents have
understood or the question put to them. Among this type were detected (depending on
response) 6 categories: feelings/emotions, moods, ethical/moral values, physiological/visceral
states, cognitive experiences and joker words. With regard to the correction or responses
have been considered in this case 4 categories: nouns, participles/adjectives, infinitives,
triggering stimuli (situations, objects ...). As a result of qualitative analysis found nested
frequency distributions in order, we give an index of what emotions / feelings are more
popular.
Keywords: Emotional development; Emotional education; emotional vocabulary; Affections
and education.
978-84-695-8363-0
302
Introduccin
El estudio que hemos realizado, pretende cambiar la perspectiva actual de igualacin
del mundo afectivo con el cognitivo; a raz de las corrientes lideradas por Goleman y Mayer,
que parecen influidas por una nueva forma del racionalismo. En efecto, ambas posiciones para
traslucir la idea de que las emociones han de ser identificadas, utilizadas y aprovechadas
segn ideas previas que suelen tener un carcter terico o ideolgico. Un reflejo ms de la
influencia cognitiva de estas perspectivas son los tests que intentan medir los Cocientes
emocionales (CIE) como el MSCEIT. El paralelismo en ellos entre inteligencia o capacidad
para entender o comprender, que no es la misma que la de las emociones, que tienen que ver
con mover hacia (emovere) o con los sentimientos (relacionados con el sentir y los sentidos).
Como consecuencia las emociones y otros afectos son contemplados como algo que hay
controlar o utilizar de algn modo.
Lejos quedan los planteamientos de los interaccionistas, quienes en la dcada de los 80
desarrollaron multitud de trabajos sobre la relacin entre los factores cognitivos y emocionales. Entre estos trabajos podemos destacar los trabajos de Izard, C. (1978), Kaplan, S.
(1982), Lazarus, R.S. (1982), Scherer, K. R. (1984), Zajonc, R. B. (1980), Zajonc, R. B.
(1984) y Ulich, D. (Dieter) (1982), entre los de dicha dcada, o, anteriormente, Schachtel,
Ernest G. (1959 (1962)) y Schachter, S. & Singer, J. (1962) en la dcada de los 60.
Precisamente basado en ese enfoque interaccionista, se pueden encontrar tambin algunos
tests de desarrollo emocional, anteriores a la corriente de la Inteligencia Emocional (Cohen,
H.; Weil, G. y Pollak, J. (1983)), el Emotional Development Test, con postulados muy
parecidos al nuestro. Tambin han quedado injustamente de lado o el enfoque analtico de
Plutchick, en el que adquiere gran importancia la descripcin y dilucidacin de nmero y
naturaleza de los mismos; quedando nicamente para especialistas.
Mtodo
Se han analizado los resultados obtenidos con el test TDE, aplicado a una muestra de
476 escolares de Secundaria, del mbito geogrfico de las provincias de Sevilla, Huelva y
Cdiz. Esta misma prueba se administr tambin a 441 escolares de primaria, en el mismo
mbito geogrfico. En concreto, para este estudio se ha utilizado el tem vocabulario del
referido test, en el que se pide a los sujetos que hagan una relacin de las, emociones,
sentimientos o afectos que conozcan. Para formular este tem se parti de la base de que el
conocimiento de la palabra que designa a una emocin puede ser un indicador del grado de
conocimiento o de experiencia que se ha tenido de la misma.
Resultados
Con los alumnos/as de Secundaria, se han obtenido datos que nos permiten ver las
emociones y afectos preponderantes en nuestros escolares, as como el conjunto de ideas que
existen a torno a estos.
Por un lado se puede comprobar que los afectos ms citados son aquellos que pudieran
esperarse. Los citamos por orden de frecuencia (se ha de tener en cuenta que algunos jvenes
dieron hasta 70 respuestas y otros ninguna): 950, de la familia de afectos relacionados con la
felicidad, la alegra, la risa, etc.; 860, relacionados con la ira, el odio, el enfado, etc.; 801 con
la tristeza, la depresin, la amargura, etc.; 687 con el amor, el cario, el deseo, etc.; 435 con el
miedo, el temor, el terror, el pnico, etc.; 326 con el estrs/la ansiedad; 285 con la soledad, el
978-84-695-8363-0
303
aislamiento, etc.; 210 con la infelicidad, insatisfaccin, el descontento; 186 con la amistad;
159 con la seguridad y la confianza; 144 con la culpa, vergenza, arrepentimiento, etc.; 127
con la nostalgia; 102 con el aburrimiento y el hasto; 99 con la empata/simpata; 83 con los
celos; 72 con la esperanza; 73 con el placer/displacer/sexualidad; 60 con la sorpresa; 56 con la
admiracin/decepcin; 55 con la impotencia; 49 con la ilusin; 37 con el orgullo; 29 con el
asombro otros 29 relacionados con la muerte; 6 relacionados especficamente con la familia,
aunque sta es citada en otros casos relacionados con las emociones antes mencionadas.
Adems de ello, en 131 casos expresaron estados de nimo poco intensos, experimentados
como sensaciones, como bajn, cohibido, raro
Pero los datos que ms llaman la atencin como ndice de la necesidad de una
educacin emocional es que hay muchas respuestas en las que se ve que los jvenes
confunden otras experiencias con los afectos, como por ejemplo: valores morales, tanto de
signo positivo (392) como negativo (396); estados fisiolgicos (212); estados cognitivos
(269); 127 se refieren a afectos no especificados, como emocin, sentimiento, afecto, etc.
(palabras comodn); 166 se refieren a estmulos, pero sin especificar el afecto que producen,
como mi novia, el ftbol, etc.; o bien se refieren a rasgos de la personalidad en 83 de los
casos, 49 se refieren a ilusin; 73 a placer/displacer/sexualidad; 56 a
admiracin/decepcin; 76 a tranquilidad/serenidad y, finalmente, 138 respuestas que no
hemos podido clasificar an, de las 7964 emitidas por los jvenes (algunas por ilegibles).
Fijndonos slo en las respuestas ms repetidas (con ms de 400 respuestas) y
analizadas las que fueron dadas en primer lugar (hay que tener en cuenta que hubo jvenes
que dieron hasta 70 de ellas), stos arrojaron resultados diferentes, pues en este caso el
amor (143) y la alegra/felicidad (123) destacan sobre todos los dems resultados
(hablamos siempre de la familia semntica relacionada con el amor con la alegra/felicidad),
lo que no sabemos si interpretarlo como aquello a lo que los jvenes conceden mayor
importancia o a que otros afectos negativos estn ms censurados socialmente.
Primera respuesta
Frecuencia
Vlidos
alegra/felicidad
amor
ira/odio
miedo (r)
tristeza
Total
21
123
143
33
23
69
476
Porcentaje
4,4
25,8
30,0
6,9
4,8
14,5
100,0
Porcentaje
vlido
4,4
25,8
30,0
6,9
4,8
14,5
100,0
Porcentaje
acumulado
4,4
31,7
62,8
74,4
80,5
99,4
Discusin
Todas estas respuestas fallidas de los jvenes nos hacen pensar en la necesidad de
una educacin emocional, pues resulta claro que si ellos no son capaces de diferenciar entre lo
que son emociones o sentimientos y lo que no lo son, difcilmente podrn identificar en s
mismo o en los dems algunos de los muy diferentes afectos de los que es capaz el ser
humano. Mientras esos jvenes no tengan una idea clara de en qu consiste la rica vida
emocional de nuestra especie, deberemos pensar que existe una grave carencia educativa este
respecto.
978-84-695-8363-0
304
978-84-695-8363-0
305
978-84-695-8363-0
306
978-84-695-8363-0
307
978-84-695-8363-0
308
Mayer, J., Salovey, P. y Caruso, D. (2009). Test de Inteligencia Emocional Mayer-SaloveyCaruso. MSCEIT. Manual. Madrid: TEA Ediciones.
Mayer, J.D. y Salovey, P. (1997). What is emotional intelligence? In P. Salovey & D. Sluyter
(Eds), Emotional Development and Emotional Intelligence: Implications for
Educators (p. 3-31). Nueva York: Basic Books.
Bibliografa sobre la Educacin y el Entrenamiento Emocional
lvarez, M. (Coord.), Bisquerra, R., Cuadrado, M. y Pascual, V. (2006). Diseo y evaluacin
de programas de educacin emocional. Madrid: Praxis.
Bisquerra, R. y (CGROP, Grup de Recerca en Orientacin Psicopedaggica) (2006).
Educacin emocional y bienestar. Barcelona: Praxis.
Chase, L. (1993). Educacin afectiva: desarrollo acadmico, social y emocional del nio.
Mxico: Trillas.
Cruz, M V. y Mazaira, M C. (1992). DSA. Programa de Desarrollo Socio-Afectivo. Madrid:
TEA Ediciones.
Elias, M., Tobias, E. y Friedlander, B. (2001). Educar adolescentes con inteligencia
emocional. Barcelona: Plaza y Jans.
Gallardo, P. y Gallardo, J.A. (2009). Inteligencia emocional y programas de educacin
emocional: desarrollo emocional, social y moral en la Educacin Primaria. Sevilla:
Wanceulen.
Goleman, D. (1999). La prctica de la Inteligencia Emocional. Barcelona: Kairs
Lloret, V. Las emociones que transforman a los directivos en lderes. Alicante: Innovaceei.
Sastre, G. y Moreno M. (2003). Resolucin de conflictos y aprendizaje emocional: una
perspectiva de gnero. Barcelona: Gedisa.
Sodevila, A. (2009). Emocinate: programa de educacin emocional. Madrid: Pirmide.
Steiner, C. y Perry, P. (2002). La educacin emocional: una propuesta para orientar las
emociones personales. Madrid: Suma de letras.
Valls, A. y Valls, C. (1999). DIE Desarrollando la inteligencia emocional. Programas para
el desarrollo de la inteligencia emocional IV y V. Madrid: EOS.
Zapf, D. (2009). Emociones en el trabajo. Mente y cerebro, 34, 52-57.
Valls, A. (2002). Habilidades emocionales. 2 curso Educacin Secundaria. Edit. Alcoy:
Marfil.
978-84-695-8363-0
309
Resumen
El objetivo del presente estudio es analizar las relaciones existentes entre la inteligencia
emocional y las habilidades sociales percibidas por el propio alumno y por sus compaeros
en un grupo de estudiantes de Educacin Secundaria Obligatoria. Tambin se pretende
conocer las relaciones existentes entre estas variables y el rendimiento acadmico. Los
participantes en el estudio fueron 128 estudiantes del primer ciclo de E.S.O. Para la
evaluacin de la competencia social autopercibida empleamos la Batera de Socializacin
(BAS1, autoevaluacin) de Silva y Martorell y el Bull-S de Cerezo para la evaluacin de
habilidades sociales percibidas por los compaeros. Para la evaluacin de la inteligencia
emocional se aplic el instrumento BarOn EQ-i: YV (S). La evaluacin de la habilidad
intelectual se realiz mediante el test de Factor G de Catell (escala 2). Los datos sobre el
rendimiento acadmico se obtuvieron calculando la calificacin media considerando todas
las asignaturas cursadas por el alumno. Los resultados, que se desprenden de los anlisis
correlacionales y predictivos mediante el empleo de la regresin jerrquica, ponen de
manifiesto cules son las variables relativas a inteligencia emocional y habilidades sociales
que hacen una mayor contribucin a la explicacin del rendimiento acadmico, una vez
controlado el efecto de la inteligencia general.
Descriptores: Inteligencia emocional, habilidades sociales, competencia social, rendimiento
acadmico, Educacin Secundaria Obligatoria.
Abstract
The aim of the present study is to analyze the existing relations between the emotional
intelligence and the social skills perceived by the own pupil and by his mates in a group of
students of Secondary Obligatory Education. Also one tries to know the existing relations
between these variables and the academic performance. The participants in the study were
128 students of the E.S.O's first cycle. For the evaluation of the social autoperceived
competence we use the Battery of Socialization (BAS1, self-assesment) of Silva & Martorell
and Bull-S of Cerezo for the evaluation of social skills perceived by the companions. For the
evaluation of the emotional intelligence was applied the instrument BarOn EQ-i:YV (S). The
evaluation of the intellectual skill fulfilled by means of the test of Factor G de Catell (scale 2).
The academic performance data was obtained calculating the average qualification
considering all the subjects studied by the pupil. The results obtained from correlated
analyses and predicted analyses, through the employment of the hierarchic regression, reveal
which are the variables relative to emotional intelligence and social skills that do a major
978-84-695-8363-0
310
contribution to the explanation of the academic performance, once controlled the effect of the
general intelligence.
Keywords: Emotional intelligence, social skills, social competence, academic performance,
Secondary Obligatory Education.
Introduccin
Con el fin de afrontar los objetivos marcados por las normativas vigentes en materia
de educacin, y con la consecucin de un desarrollo integral del alumno como meta a
alcanzar, las escuelas se encuentran con nuevos retos a los que dar respuesta. Es necesario,
por lo tanto, la revisin de los contenidos a ensear y las propuestas de actuacin dentro de
los centros educativos, siendo conscientes que aspectos como la competencia social, la
inteligencia emocional y las habilidades sociales han de ser incluidos como elementos
fundamentales de la realidad curricular.
La escuela se convierte ahora en un ambiente en el que aparecen numerosas demandas
referidas a la competencia social (Lpez, 2006; Elias y Haynes, 2008). La regulacin de
emociones para facilitar el pensamiento, la concentracin, el control del comportamiento
impulsivo, la actuacin acadmica efectiva bajo situacin de estrs y un desarrollo de la
motivacin intrnseca son facetas que requeridas a la hora de realizar un trabajo adecuado
dentro de la escuela (Baumeister, Heatherton, & Tice, 1994). Sumado a ello, son diversos
estudios los que explicitan que unas buenas relaciones con los compaeros favorecen la
implicacin del estudiante en su trabajo acadmico (Hawkins, Catalano, Kosterman, Abbott,
& Hill, 1999).
La autopercepcin de los alumnos sobre su competencia social conforma un elemento
fundamental a la hora de entender qu factores son los ms influyentes en un efectivo
desarrollo en esta materia. Por lo tanto entendemos la competencia social como aquella que se
basa en llevar a cabo comportamientos hbiles para alcanzar el bienestar psicosocial, a travs
de la adaptacin, la percepcin de autoeficacia, la aceptacin de los otros y los refuerzos
agradables (Martnez Otero, 2001). No obstante, la percepcin por parte de los compaeros
tambin juega un papel importante a la hora de desarrollar aquellas habilidades necesarias
para considerar a un alumno competente socialmente. Es por ello que, para que un sujeto
pueda ser competente socialmente deber reunir una serie de aspectos que le permitan
conseguir un equilibrio entre la visin que tiene de si mismo y la retroalimentacin que le
ofrece el mbito social al que pertenece (Palomero Fernndez, 2009; Encabo y Lpez, 2002).
Adems, son varios los estudios que expresan las ventajas de un buena inteligencia emocional
como factor que favorece un desarrollo en competencia social (Durlak, Weissberg, Dymnicki,
Taylor y Schellinger, 2011; Jimnez y Lpez Zafra, 2011)
Existen numerosos estudios que sealan la potencial utilidad de la inteligencia
emocional en el contexto acadmico y de integrar la enseanza emocional en las escuelas
(Lopes y Salovey, 2004; Gil-Olarte, Palomera y Brackett, 2006).
La competencia social y la inteligencia emocional se relacionan con la creacin de
espacios seguros en los que poder compartir la propia experiencia social y emocional, tomar
conciencia de ella y generar los procesos de cambio que libremente se elijan. Las habilidades
978-84-695-8363-0
311
sociales se convierten un buen modulador de estas experiencias dado que el alumno pasa un
alto porcentaje de su tiempo en alguna forma de interaccin social. En palabras de Del Prette,
De Oliveira, Gresham y Vance (2012) estas se convierten en un posible predictor de
problemas de aprendizaje. Problemas de muchos tipos, como por ejemplo fracaso escolar,
inadaptacin social, ansiedad o conductas disruptivas, pueden generarse si la escuela no
facilita la adquisicin de habilidades sociales (Martnez-Otero, 2005).
Por lo tanto, el objetivo del presente estudio es analizar las relaciones existentes entre
inteligencia emocional y las habilidades sociales percibidas por el propio alumno y por sus
compaeros. Adems, tambin se plantea conocer las relaciones existentes entre estas
variables y el rendimiento acadmico.
Mtodo
Participantes
Los participantes en este estudio son 128 estudiantes espaoles del primer ciclo de
Educacin Secundaria Obligatoria con edades comprendidas entre los 12 y los 14 aos, el
52,7 % cursan 1 y el 47,3 % cursan 2. Por otro lado, en cuanto al gnero, el 49,1% de los
sujetos son mujeres y el 50,9% son varones.
Instrumentos
Los instrumentos empleados fueron:
a) La medida del Cociente Emocional, versin para jvenes (EQ-i: YV) de Bar-On
(1977, 2000); que nos da informacin sobre cuatro aspectos de la inteligencia emocional:
factor intrapersonal, factor interpersonal, factor de manejo de estrs y factor de adaptabilidad;
as como una puntuacin total de la inteligencia emocional. Ugarriza (2001) encuentra un
coeficiente de consistencia interna para el cuestionario total de = .93.
b) La evaluacin de la competencia social, a travs la Batera de Socializacin BAS1
(Silva y Martorell, 1987). Este autoinforme mide con 75 tems diversas conductas sociales
como: consideracin por los dems, liderazgo, autocontrol, retraimiento y ansiedad social.
Los estudios psicomtricos presentados en el manual del test evidencian adecuados niveles de
fiabilidad y validez (= .73)
c) Test de Factor G de Cattell (Escala 2) (Cattell y Cattell, 1973). Evala el
funcionamiento intelectual, estando libre de condicionamiento cultural. Las puntuaciones
obtenidas en los distintos subtest (series, clasificacin, matrices y condiciones) se combinan
para obtener una nica puntuacin directa que despus se transforma en CI siguiendo las
instrucciones establecidas en el manual de referencia del test.
d) Para la evaluacin de las habilidades sociales percibidas por los compaeros se utiliza
el Bull-S (Cerezo, 2000). Este instrumento, analiza la estructura interna del aula desde la
perspectiva de los estudiantes en funcin de los ndices de aceptacin y rechazo. Ofrece unos
niveles de fiabilidad aceptables (=.73)
978-84-695-8363-0
312
Procedimiento
Para la elaboracin de este estudio, en un primero momento, se solicit la
participacin del Centro Educativo, exponiendo los objetivos de investigacin, los beneficios
esperados y el tipo de colaboracin que se solicitaba del Centro. En un segundo momento,
tras una sesin informativa, se solicit el consentimiento de los padres para que sus hijos
participasen en el estudio.
Los diferentes inventarios utilizados en este trabajo fueron administrados en sesiones
de tutora. En primer lugar se obtuvieron los resultados referentes a la habilidad intelectual
(Escala Factor G), en segundo lugar obtuvimos datos referentes a la inteligencia emocional
(EQ-i de Bar-On), en tercer lugar se obtuvieron los datos de la autoevaluacin de la
competencia social (BAS 1) y finalmente se administr el test sociomtrico (Bull-S). Para los
datos referentes al rendimiento acadmico se recogieron las calificaciones obtenidas en las
asignaturas comunes en ambos cursos y se calcul la calificacin media.
Diseo y Anlisis de datos
Con el fin de conocer la relacin existente entre las variables referentes al rendimiento
acadmico, habilidad intelectual, inteligencia emocional y la competencia social
(autopercibida y percibida por los compaeros) se requiere el uso de un diseo correlacional.
Por otro lado, se pretende conocer el valor predictivo de las variables consideradas en este
estudio sobre el rendimiento acadmico. Para ello se lleva a cabo un anlisis de regresin
jerrquica tomando como variable criterio la media de los resultados acadmicos obtenidos.
Para el anlisis de datos se ha empleado el paquete estadstico SPSS- Versin 19.
Resultados
Anlisis correlacionales
En la Tabla 1 se muestran las correlaciones entre las variables analizadas. De los
anlisis de correlacin se desprende que existen correlaciones significativas entre los
diferentes factores de cada uno de los cuestionarios empleados, como caba esperar.
Destaca principalmente en este apartado que aparecen correlaciones significativas
entre el rendimiento y el Coeficiente Intelectual (CI) (r=.476, p=.000), el factor de
retraimiento social (BAS1) (r=-.218, p=.007) y el nivel de aceptabilidad sociomtrica (r=.334,
p=.000).
978-84-695-8363-0
313
Tabla 1
Correlaciones entre variables
V1
1.00
.476**
-.081
.134
-.044
.078
.028
-.030
-.218*
V2
V3
V4
V5
V6
V1
V2
V3
V4
V5
V6
V7
V8
V9
V7
V8
V9
1.00
-.012
.065
-.086
.065
.036
-.032
-.158*
1.00
-.084
.017
-.066
.040
.054
-.161*
1.00
-.010
.175*
.626**
.128
-.207*
1.00
-.100
.123
.463**
-.260*
1.00
-.032
-.167*
-.013
V10
V11
.043
.019
-.049
-.150*
.065
-.045
.150*
-.005
-.101
-.044
-.005
.074
1.00
.320**
.319**
.018
.094
1.00
.109
1.00
.155*
.078
.287*
-.094
V12
.061
.197*
.136
-.184*
-.252*
.080
-.210*
.098
.601**
.013
12.28
2.012
8.86
3.194
.255*
.178*
2.02
2.137
V13
.334**
.209*
-.096
.245*
-.116
.050
Media
DS
5.46
1.510
100.44
15.275
17.09
17.425
18.13
3.097
15.08
2.455
17.61
16.946
V10
1.00
.181*
.183*
.112
4.73
3.018
V11
V12
V13
1.00
-.084
1.00
.060
.104
1.00
4.31
1.692
6.38
1.932
5.70
4.184
*p = <.05; **p = <.01; V1= Media del Rendimiento; V2= Coeficiente Intelectual (Factor G); V3= Factor
intrapersonal (EQ-i); V4= Factor interpersonal (EQ-i ); V5= Factor Manejo del Estrs (EQ-i); V6= Factor
Adaptabilidad (EQ-i ); V7= Factor Consideracin social (BAS1); V8= Factor Autocontrol (BAS1); V9= Factor
Retraimiento Social (BAS1); V10= Factor Ansiedad Social y Timidez (BAS1); V11= Factor Liderazgo (BAS1);
V12= Factor Sinceridad (BAS1); V13= Aceptabilidad (Bull-S)
978-84-695-8363-0
314
Tabla 2
Resumen del anlisis de regresin de tipo jerrquico para las variables predictoras del Rendimiento
Acadmico (N= 128)
Variable
Paso 1
CI general
Paso 2
CI general
EQ-i intrapersonal
EQ-i interpersonal
EQ-i manejo estrs
EQ-i adaptabilidad
Paso 3
CI general
EQ-i intrapersonal
EQ-i interpersonal
EQ-i manejo estrs
EQ-i adaptabilidad
Bas1 consideracin social
Bas1 autocontrol
Bas1 retraimiento social
Bas1 ansiedad social y timidez
Bas1 liderazgo
Bas1 sinceridad
Paso 4
CI general
EQ-i intrapersonal
EQ-i interpersonal
EQ-i manejo estrs
EQ-i adaptabilidad
Bas1 consideracin social
Bas1 autocontrol
Bas1 retraimiento social
Bas1 ansiedad social y timidez
Bas1 liderazgo
Bas1 sinceridad
Bull aceptacin
SEB
,047
,008
,476**
,046
-,006
,046
,001
,002
,008
,007
,039
,049
,007
,467**
-,066
,093
,001
,027
,046
-,008
,051
-,031
,001
-,113
,004
-,160
,063
,080
-,055
,008
,007
,053
,061
,007
,085
,056
,066
,043
,075
,083
,463**
-,094
,104
-,051
,011
-,150
,008
-,246*
,126
,089
-,071
,043
-,006
,026
-,009
,001
-,088
-,017
-,129
,048
,065
-,082
,070
,008
,007
,053
,061
,007
,084
,056
,067
,043
,074
,083
,031
,437**
-,066
,054
-,014
,015
-,118
-,037
-,199
,096
,073
-,105
,193*
Nota. R2 = .226 para paso 1 ( p=.000); R 2 = .016 para paso 2 (p=.637); R 2 = ..055 para paso 3 (p=.181); R2 =
..030 para paso 4 (p=..026)
*p<.05. **p<.005
Discusin
A la vista de los resultados, las variables que muestran una relacin significativa o
contribuyen de modo significativo a la explicacin del rendimiento acadmico en una muestra
de estudiantes de Educacin Secundaria Obligatoria giran entorno a los aspectos de la
inteligencia emocional y la competencia social autopercibida y percibida por los compaeros.
Son varios los estudios que indican la alta importancia que tiene un buen desarrollo de
la competencia social con la consecucin de unos buenos resultados acadmicos (Shernoff,
2010; Barbarin, 2012; Brackett, Rivers, Reyes y Salovey, 2012; Mavroveli, 2012;). Por otro
lado, un buen uso de las habilidades sociales, junto a un buen desarrollo de la inteligencia
emocional, se convierten en factores clave para la resolucin de problemas de
comportamiento (Lopes & Salovey, 2004; Eisenberg & Fabes, 2006; Gil-Olarte et al., 2006;).
978-84-695-8363-0
315
Los resultados de nuestro trabajo ponen de manifiesto la relacin existente entre los
factores de inteligencia emocional y los factores propios de competencia social, como
elementos relacionados con la consecucin de buenos resultados tal y como expresan varios
autores (Eisenberg y Fabes, 2006; Guil et al., 2006).
Nuestro estudio pone de manifiesto que, una vez son controladas las variables de
habilidad intelectual, y de inteligencia emocional, es el factor de inteligencia general (CI) el
que se presenta como uno de los mayores predictores de los resultados acadmicos tal y como
expresan diversos autores en estudios recientes (Calvin et al., 2012; Kaufman, Ryenolds, Liu,
Kaufman y McGrew, 2012; Deary y Maltby, 2013).
Por otro lado, bajo este mismo control, podemos observar que los niveles de
competencia social percibida por los compaeros tambin se exponen como uno de los
factores a tener en cuenta como uno de los predictores del rendimiento acadmico. Por lo
tanto atender a las realidades sociales de los diferentes grupos de aulas, entender qu roles
juegan en dicho grupo, y conocer de qu manera se establecen las relaciones entre esos grupos
puede ofrecer mucha informacin de cara a entender los esfuerzos acadmicos realizados, tal
y como expresan diversos autores (Meijs, Cillessen, Scholte y Spijkerman, 2010; Veronneau,
Vitaro, Brendgen, Dishion, Tremblay, 2010; Simone, 2013)
A pesar de la insistencia de las diferentes normativas que regulan el proceso Educativo
en Educacin Secundaria por un desarrollo integral efectivo, encontramos que las prcticas
educativas y la realidad docente hacen notorio que no existe la suficiente dedicacin a tratar
este tipo de competencias. La escuela como ambiente propicio al desarrollo de estas
competencias debido a su alta demanda (Bernart, 2006; Lpez, 2006), ve necesario la
revisin de aquello que pretende ensear, y debe proponer nuevas alternativas.
En conjunto, en nuestro trabajo se han identificado una serie de variables que estn
directamente implicadas en el rendimiento acadmico. La extensin de este trabajo a otros
participantes y a otro contexto instruccional puede consolidar los resultados obtenidos y
soslayar las posibles limitaciones del mismo.
Referencias
Baumeister, R.F., Heatherton, T.F. y Tice, D.M. (1994). Losing control: How and why people
fail at self-regulation. San Diego, CA: Academic Press.
Bar-On, R. (1997). BarOn Emotional Quotient Inventory Technical Manual. Toronto: MultiHealth Systems.
Bar-On, R. (2000). Emotional and social intelligence: Insights from the Emotional Quotient
Inventory (EQ-i). En R. Bar-On y J.D.A. Parker (Eds.), The handbook of emotional
intelligence: theory, development, assessment, and application at home, school, and in
the workplace (pp. 363-387). San Francisco, CA: Jossey-Bass Inc.
Barbarin, O. (2012). Boys of color: trajectories of social competence and academic
achievement. International Journal of Psychology, 47, 237-237.
978-84-695-8363-0
316
Brackett, M. A., Rivers, S. E., Reyes, M. R., y Salovey, P. (2012). Enhancing academic
performance and social and emotional competence with the RULER feeling words
curriculum. Learning and Individual Differences, 22(2), 218-224.
Calvin, C. M., Deary, I. J., Webbink, D., Smith, P., Fernandes, C., Lee, S. H., y Visscher, P.
M. (2012). Multivariate genetic analyses of cognition and academic achievement from
two population samples of 174,000 and 166,000 school children. Behavior Genetics,
42(5), 699-710.
Cattell, R. y Cattell, A. (1973). Test de Factor G. Madrid: TEA.
Celant, S. (2013). The analysis of students' academic achievement: the evaluation of peer
effects through relational links. Quality & Quantity, 47(2), 615-631.
Cerezo, F. (2000). El Test Bull-S. Instrumento para la evaluacin de la agresividad entre
escolares. Madrid: Albor-Cohs.
Deary, I. J., & Maltby, J. (2013). Intelligence and individual differences. Psychologist, 26(1),
30-33.
Del Prette, Z., De Oliveira, L., Gresham, F. y Vance, M. (2012). Role of social performance
in predicting learning problems: prediction of risk using logistic regression analysis.
School Psychology International, 33(6), 615-630.
Durlak, J., Weissberg, R,. Dymnicki, B., Tylor, R. y Schellinger, K. (2011). The Impact of
enhancing students social and emotional learning: a meta-analysis of school-based
universal interventions. Child Development, 82(1), 405-432.
Eisenberg, N. y Fabes, R.A. (2006). Emotion regulation and childrens socioemotional
competence. En L. Balter y C. Tamis-LeMonda (Eds.), Childs psychology: a
handbook of contemporary issues (pp. 357-381). Nueva York: Psychology Press.
Elias, M. y Haynes, N. (2008). Social competence, social support and academic achievement
in minority, low-income, urban elementary school children. School Psychology
Quarterly, 23(4), 474-495.
Encabo, E. y Lpez, A. (2002). Competencia comunicativa, identidad de gnero y formacin
del profesorado. Revista Interuniversitaria de Formacin del Profesorado, 43, 113122.
Gil-Olarte, P., Palomera, R. y Brackett, M.A. (2006). Relating emotional intelligence to social
competence and academic achievement in high school students. Psicothema, 18, 118123.
Guil, R., Gil-Olarte, P., Mestre, J.M. y Nuez, I. (2006). Inteligencia emocional y adaptacin
socioescolar.
Disponible
en:
http://reme.uji.es/articulos/numero22/article5/numero%2022%20article%205%20INT
EL.pdf
978-84-695-8363-0
317
Hawkins, J.D., Catalano, R.F., Kosterman, R., Abbott, R. y Hill, K.G. (1999). Preventing
adolescent health-risk behaviors by strengthening protection during childhood.
Archives of Pediatric and Adolescent Medicine, 153, 226-334.
Jimnez, M., Lpez Zafra, E. (2011). Actitudes sociales y adaptacin social en adolescentes
espaoles: el papel de la inteligencia emocional percibida. Revista de Psicologa
Social, 26(1), 105-117.
Kaufman, S. B., Reynolds, M. R., Liu, X., Kaufman, A. S. y McGrew, K. S. (2012). Are
cognitive g and academic achievement gone and the same g? An exploration on the
woodcock-johnson and kaufman tests. Intelligence, 40(2), 123-138.
Lopes, P.N. y Salovey, P. (2001). Emotional intelligence and social-emotional learning:
assessing emotional intelligence and developing skills and flexibility. CEIC Review,
22, 12-13.
Lopez, D. (2006). The social competence of homeschooled and conventionally schooled
adolescents: a preliminary investigation. Dissertation Abstracts International: Section
B: The Sciences and Engineering, 66(7-B) 2006, 3974.
Martnez-Otero, V. (2001). Convivencia escolar: problemas y soluciones. Revista
Complutense de Educacin, 12 (1).
Mavroveli, S., y Sanchez-Ruiz, M. J. (2011). Trait emotional intelligence influences on
academic achievement and school behaviour. British Journal of Educational Psychology,
81(1), 112-134.
Meijs, N., Cillessen, A. H. N., Scholte, R. H. J., Segers, E., y Spijkerman, R. (2010). Social
intelligence and academic achievement as predictors of adolescent popularity. Journal of
Youth and Adolescence, 39(1), 62-72.
Palomero Fernndez, Pablo (2009). Desarrollo de la competencia social y emocional del
profesorado: una aproximacin desde la psicologa humanista. REIFOP, 12(2), 145153.
Shernoff, D. J. (2010). Engagement in after-school programs as a predictor of social
competence and academic performance. American Journal of Community Psychology,
45(3-4), 325-337.
Silvia, F. y Martorel, M. C. (1987). Batera de Socializacin BAS-3. Madrid: TEA
Topping, K., Bremner, W. y Holmes, E.A. (2000). Social competence. The social construction
of the concept. En R. Bar-On y J. Parker (Eds.), The handbook of emotional
intelligence: theory, development, assessment, and application at home, school, and in
the workplace (pp. 28-39). San Francisco: Jossey-Bass/Pfeiffer.
Ugarriza, N. (2001). La evolucin de la Inteligencia emocional a travs del Inventario de Bar
On (I-CE) en una muestra de Lima metropolitana. Disponible en:
http://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/2872458.pdf
978-84-695-8363-0
318
978-84-695-8363-0
319
Resumen
Conocedores de las dificultades presentadas por las personas con trastornos del espectro
autista (TEA) para el desarrollo de habilidades emocionales y sociales, en la presente
investigacin se dise un programa didctico de enseanza y aprendizaje de la comprensin
de emociones y creencias dirigido a mejorar dichas habilidades, con la finalidad de favorecer
la generalizacin de los aprendizajes adquiridos. Llevamos a cabo un diseo de caso
mltiple, basado en la investigacin-accin, destinado a mejorar las habilidades emocionales
y sociales de cuatro alumnos de educacin secundaria con TEA, con la participacin de la
docente, los padres y el equipo investigador universitario. Los resultados obtenidos,
expresaron mejoras en el rendimiento de los alumnos en dichas habilidades, tanto en el
entorno familiar como en el escolar, tras el proceso de intervencin educativa, consiguiendo
incluso cierta generalizacin de las enseanzas adquiridas a sus contextos cotidianos.
Descriptores: trastorno del espectro autista, habilidades emocionales y sociales,
colaboracin familia-escuela-universidad.
Abstract
Aware of the difficulties presented by people with autism spectrum disorders (ASD) to
develop emotional and social skills, in this investigation was designed an educational
program of teaching and learning emotion and beliefs comprehension, aimed at improving
those skills, achieving widespread of the learning acquired. We designed a multiple case
based on research-action, aimed at improving emotional and social skills of a secondary
education student with ASD, with the participation of teachers, parents and university
research team. The results showed improvements in the students performance in those skills,
both within the family and in school, after educative intervention, getting to generalizate
learnings achieved from school to daily situations.
Keywords: autism spectrum disorders, emotional and social skills, family-school-university
collaboration.
978-84-695-8363-0
320
Introduccin
Analizando los mltiples estudios en los que se describen las distintas caractersticas
con las que cuentan las personas con trastorno del espectro autista (TEA), se observ la
presencia de una serie de necesidades, que se crey conveniente cubrir, como las enunciadas
por Rivire (1998, p.26):
Es autista aquella persona para la cual las otras personas resultan opacas e
impredecibles; aquella persona que vive como ausente mentalmente ausentes a las
personas presentes y que, por todo ello, se siente incompetente para predecir, regular y
controlar su conducta por medio de la comunicacin. Es autista aquella persona a la que algn
accidente de la naturaleza (gentico, metablico, infeccioso, etc.) ha prohibido el acceso
intersubjetivo al mundo interno de las otras personas. Aquel para el cual los otros y
probablemente el s mismo son puertas cerradas.
De las diversas carencias encontradas en ese estudio inicial, se decidi centrar esta
investigacin en las relativas a las emociones, a su reconocimiento y justificacin o en la
atribucin de estados mentales a los dems. Este aspecto se encuentra presente en nios de
cuatro aos con desarrollo tpico, pero no forma parte de las personas con TEA o si lo hace, se
encuentra aminorado, encontrando su explicacin en la existencia de un dficit en el
desarrollo de una teora de la mente (Baron-Cohen, Leslie & Frith, 1985), haciendo
referencia este concepto a la habilidad para comprender y predecir la conducta de otras
personas, sus conocimientos, sus intenciones y sus creencias.
El examen de estudios previos relacionados con esta temtica, aport la existencia de
efectos positivos en alumnos con TEA, al llevar a cabo intervenciones para la enseanza de
habilidades sociales y emocionales (Lozano & Alcaraz 2010; Lozano, Alcaraz & Cols, 2010
a, b). Debido a que los progresos logrados, tenan lugar muy lentamente en multitud de
ocasiones, se plante un trabajo conjunto entre la familia, la escuela y el equipo investigador
que colabor con ambos, con la finalidad de conseguir un mayor avance en la adquisicin de
las habilidades sociales.
Por ello, estimamos conveniente establecer al contexto familiar como el punto de
partida de nuestras intervenciones (Moes & Frea, 2002), ayudndonos de la informacin
obtenida por la familia, para individualizar el proceso de enseanza y aprendizaje, de cara a la
mejora de la educacin de los alumnos (Bas & Prez de Guzmn, 2010; Garca, Gomariz,
Hernndez & Parra, 2010).
Resulta conveniente que se preste especial atencin a la informacin aportada por las
familias, pues las necesidades que presentan en relacin a la atencin educativa de sus hijos,
no siempre coinciden con aquella percibida por los profesionales educativos (Dillenburger,
Keenan, Doherty, Byrne & Gallagher, 2010).
El proceso de intervencin no produjo beneficios nicamente en los alumnos objeto de
estudio, sino que adems actu sobre el mbito familiar, pues se detectaron cambios en el
modo en que los padres se dirigen a sus hijos, observndose un aumento de comentarios
sensibles hacia ellos, tras su participacin en el desarrollo de procesos de intervencin sobre
sus hijos (Giorlametto, Sussman & Weitzman, 2007).
978-84-695-8363-0
321
El que las intervenciones con alumnos con TEA, tuviera lugar en situaciones de
enseanza reales y naturales, fue defendido por diversos autores, encontrndose entre ellos
Moreno, Aguilera, Saldaa & lvarez, (2005), as como Ozonoff y Cathcart (1998), que
resaltaban su efectividad en la mejora del desarrollo de los nios con TEA, o Dunst, Bruder,
Trivette, Hamby, Raab y McLean (2001), quienes enunciaron las consecuencias positivas que
conlleva el brindar a los nios actividades de aprendizaje en ambientes naturales.
Por todo lo comentado hasta el momento, se decidi disear e implementar un
programa de enseanza guiado y sistemtico, cuyo fin era que cuatro alumnos con TEA
consiguieran aumentar sus habilidades emocionales y sociales, mediante una participacin
colaborativa entre la familia, la escuela y el equipo investigador universitario en el proceso de
intervencin educativa.
Objetivos
o
Valorar si el alumnado con Trastorno del Espectro Autista (TEA) consigue mejorar sus
habilidades emocionales, tras un proceso de intervencin en el que hay una colaboracin
de los mbitos Familia-Escuela-Universidad.
Optimizar las habilidades sociales de los alumnos participantes con Trastorno del
Espectro Autista (TEA), mediante el proceso de enseanza-aprendizaje diseado para
este fin.
Mtodo
Enfoque y diseo
El diseo de esta investigacin se dirige a potenciar la generalizacin de los
aprendizajes, debido a la gran limitacin que tienen los alumnos con TEA en este aspecto. La
investigacin que trataremos de describir, se llevar a cabo mediante una investigacin-accin
donde tendr lugar la participacin de la docente de los alumnos, de los padres de los mismos
y del equipo investigador universitario.
Se realiz un estudio de casos, en concreto un estudio de casos mltiples, para
responder a los objetivos propuestos (Yin, 2003). Este diseo de investigacin resulta vlido
sobretodo en estudios educativos cuando el objetivo es estudiar con diferentes alumnos una
misma innovacin. La unidad de anlisis de los casos mltiples, es un "conjunto de casos
nicos", siendo cada caso seleccionado para integrar la unidad de anlisis, escogido conforme
a ciertos criterios preestablecidos.
En esta investigacin hemos querido estudiar un mismo contenido (enseanza de
habilidades emocionales y habilidades sociales cotidianas) con diferentes alumnos con TEA,
permitindonos esta describir el modo en que los datos recogidos se vinculaban con los
objetivos propuestos.
Los estudios de casos son el resultado de implementar nuestra creencia de que todas
las situaciones son nicas y que este es el motivo por el que el equipo investigador realiza un
estudio nico utilizando una metodologa nica.
978-84-695-8363-0
322
Contexto/participantes
En este estudio de casos mltiples, la unidad de anlisis fue el proceso de enseanza
de habilidades emocionales y sociales en alumnado con TEA, siendo cuatro los alumnos
participantes en el programa de enseanza y aprendizaje de dichas habilidades. Estos alumnos
presentan un diagnstico de TEA oscilando sus edades de 13 a 18 aos.
El I.E.S en el que se encuentran escolarizados estos alumnos, est situado en uno de
los barrios ms histricos y antiguos de la ciudad de Murcia, encontrndose en l un alto
ndice de poblacin inmigrante, con un nivel econmico medio.
Tcnicas y/o instrumentos para la obtencin y el anlisis de los datos
El desarrollo del programa de intervencin y la interpretacin de resultados del
proceso de enseanza-aprendizaje, se realiz mediante la utilizacin de diversos instrumentos
y tcnicas de recogida de informacin. En concreto, fueron dos los instrumentos utilizados,
detallados a continuacin:
o Un material didctico, en formato impreso denominado Aprende con Zapo.
Propuestas didcticas para el aprendizaje de habilidades emocionales y sociales
(Lozano & Alcaraz, 2009).
La estructuracin de dicho material, permite su utilizacin como evaluacin y como
proceso de enseanza-aprendizaje. En l observamos una secuenciacin de las tareas de
enseanza-aprendizaje diferenciadas en niveles evolutivos de menor a mayor complejidad
para la comprensin de habilidades emocionales tal y como se recoge en la tabla II.
Tabla II
Enseanzas propuestas en el material didctico
Nivel 1
Nivel 2
Nivel 3
Nivel 4
Nivel 5
Enseanza de emociones
Reconocimiento facial y expresin de las
emociones de alegra, tristeza, enfado y miedo
utilizando fotografas.
Reconocimiento facial y expresin de las
emociones de alegra, tristeza, enfado y miedo
utilizando dibujos.
Reconocimiento y atribucin causal de una
expresin emocional en funcin de una situacin.
Atribucin causal de una expresin emocional en
una situacin de deseo.
Atribucin causal de una expresin emocional en
una situacin de creencia verdadera o falsa.
Enseanza de creencias
Comprensin de que las personas pueden ver
cosas distintas.
Comprensin de que las personas pueden ver
la misma cosa pero de distinta manera.
Comprensin de que las personas slo saben
las cosas que ven.
Relacin entre los conceptos de ver y saber
para predecir la accin de un personaje.
Relacin entre una creencia falsa y la conducta
de un personaje.
978-84-695-8363-0
323
Padres
120
110
100
105
100
80
evaluacin inicial
evaluacin final
60
evaluacin inicial
evaluacin final
95
40
90
20
85
80
0
alumno
1
alumno
2
alumno
3
alumno
4
alumno
1
alumno
2
alumno
3
alumno
4
978-84-695-8363-0
324
978-84-695-8363-0
325
978-84-695-8363-0
326
Bas, E. & Prez de Guzmn, M. V. (2010). Desafos de la familia actual ante la escuela y las
tecnologas de informacin y comunicacin. Educatio Siglo XXI, 28(1), 41-68.
Dillenburger, K., Keenan, M., Doherty, A., Byrne, T. & Gallagher, S. (2010). Living with
children diagnosed with autistic spectrum disorder: parental and professional views.
British Journal of Special Education, 37(1), 13-23.
Dunst, C. J., Bruder, M.B., Trivette, C. M., Hamby, D., Raab, M. & McLean, M. (2001).
Characteristics and consequences of everyday natural learning opportunities. Topics in
Early Childhood Special Education, 21(2), 68-92.
Giorlametto, L., Sussman, F. & Weitzman, E. (2007). Using case study methods to investigate
the effects of interactive intervention for children with Autism Spectrum Disorders.
Journal of Communication Disorders, 40, 470-492.
Lozano, J. & Alcaraz, S. (2009). Aprende con Zapo. Propuestas didcticas para el
aprendizaje de habilidades emocionales y sociales. Madrid: Wolters Kluwer Espaa.
Lozano, J., Alcaraz, S. & Cols, P. (2010a). La enseanza de emociones y creencias a
alumnos con trastornos del espectro autista: una investigacin colaborativa.
Profesorado, 14(1), 367-382.
Lozano, J., Alcaraz, S. & Cols, P. (2010b). Experiencia educativa sobre la comprensin de
emociones y creencias en alumnado con trastornos del espectro autista. Revista de
Investigacin Educativa, 28(1), 65-78.
Lozano, J. & Alcaraz, S. (2010). Ensear emociones para beneficiar las habilidades sociales
del alumnado con trastornos del espectro autista. Revista Siglo XXI, 28(2), 261-288.
Moes, D. & Frea, W. D. (2002). Contextualized behavioral support in early intervention for
children with autism and their families. Journal of Autism and Developmental
Disabilities, 23, 521-534.
Moreno, F. J., Aguilera, A., Saldaa, D. & lvarez, R. (2005). Cmo mejorar la educacin
del alumnado con autismo? Una propuesta desde el sistema escolar sevillano. Apuntes
de Psicologa, 23(3), 257-374.
Ozonoff, S. & Cathcart, K. (1998). Effectiveness of a Home Program Intervention for Young
Children with Autism. Journal of Autism and Developmental Disorders, 28(1).
Ozonoff, S. & Cathcart, K. (1998). Effectiveness of a home program intervention for young
childrenwith autism. Journal of Autism and Developmental Disorders, 28, 25-32.
Rivire, A. (1998). Educacin del nio autista. En J. Mayor (Ed.), Manual de Educacin
Especial. Madrid: Anaya.
Yin, R. (2003). Case study research: Design and methods (3rd ed.). Sage Publications:
Thousand Oaks, CA.
978-84-695-8363-0
327
Resumen
El BAS-II, British Ability Scales, evala las aptitudes cognitivas y el rendimiento educativo de
nios y adolescentes. Est organizada en dos partes: BAS-II Infantil (3:6 a 5:11 aos) y BASII Escolar (6:0 a 17:11 aos). El BAS-II Infantil est formado por 12 tests (6 principales y 6
diagnsticos). El BAS-II Escolar lo constituyen 13 tests (6 principales, 5 diagnsticos y 2 de
rendimiento). La parte cognitiva ofrece un ndice que resume la capacidad conceptual
general y el razonamiento (ndice General; IG) y unos ndices de aptitud intelectual que
evalan aspectos concretos de esa capacidad general: ndice Verbal (IV), Razonamiento
Perceptivo (RP), Razonamiento No Verbal (RNV) e ndice Espacial (IE). El BAS-II est
basado en la TRI (Teora de Respuesta al tem), en concreto en el modelo de Rasch de un
parmetro. La muestra de la adaptacin est formada por 1.725 sujetos de distintas
provincias espaolas. El IG presenta coeficientes de fiabilidad que varan en funcin de la
edad; en el BAS-II Infantil va de 0,85 a 0,94, mientras que en el BAS-II Escolar oscila entre
0,89 y 0,95. La estabilidad temporal test-retest es muy elevada, con coeficientes para los
ndices entre 0,83 y 0,97.
Abstract
The BAS-II, British Ability Scales, assess the cognitive abilities and educational achievement
of children and adolescents. It is organized into two batteries: BAS-II Early Years (3:6 to
5:11 years) and BAS-II School Age (6:0 to 17:11 years). The BAS-II Early Years consists of
12 scales (6 core scales and 6 diagnostic scales). The BAS-II School Age is composed of 13
scales (6 core scales, 5 diagnostic scales and 2 achievement scales). The cognitive scales
provides an index that summarizes the general conceptual ability and reasoning (General
Conceptual Ability Score, GCA), and cluster scores, that relate to specific aspects of the
overall ability: Verbal Ability, Pictorial Reasoning Ability, Non-verbal Reasoning Ability and
Spatial Ability. The BAS-II is based on the IRT (Item Response Theory), particularly in the
Rasch model of one parameter. The sample consists of 1,725 subjects from different Spanish
provinces. GCA presents reliability coefficients which vary depending on the age:BAS-II
Early Years ones go from 0.85 to 0.94 while BAS-II School Ages ones are between 0.89 and
0.95. Test-retest temporal stability is so high too, with coefficients for general index between
0.83 and 0.97.
El BAS-II, Escalas de Aptitudes Intelectuales, es una batera de tests de aplicacin
individual que evala las aptitudes cognitivas y el rendimiento educativo de los nios y los
adolescentes entre los 2 aos y 6 meses, y los 17 aos y 11 meses. Proporciona una
evaluacin psicolgica de gran utilidad en el mbito clnico y educativo, a la vez que
representa una valiosa herramienta para la investigacin. Proporciona mtodos
978-84-695-8363-0
328
BAS-II Infantil
Se divide en dos niveles: el inferior cubre las edades de 2:6 a 3:5 aos y el nivel
superior, las de 3:6 a 5:11 aos. El nivel superior incluye los ndices de aptitud intelectual y
varios tests ms exigentes.
978-84-695-8363-0
329
BAS-II Escolar
Los tests cognitivos de este nivel tienen un nico nivel que cubre las edades de 6:0 a
17:11 aos. De nuevo, los tests principales se combinan para producir tres ndices de aptitud
intelectual, que juntos forman el IG. Los dos tests de rendimiento, estn pensados para edades
de 6:0 a 17:11 aos y por tanto se presentan dentro del BAS-II Escolar.
978-84-695-8363-0
330
978-84-695-8363-0
331
- Control de lpiz.
Definiciones: Consiste en explicar el significado de una serie de palabras. Evala:
- Conocimiento del vocabulario.
- Habilidades de expresin del lenguaje, incluyendo fluidez verbal.
- Conocimiento general.
- Conceptualizacin verbal.
- Pensamiento abstracto.
- Recuperacin de la informacin de la memoria a largo plazo.
- Nivel de estimulacin del lenguaje.
Matrices: Se presenta una matriz incompleta de seis figuras abstractas. La tarea
requiere elegir entre seis opciones distintas la figura que completa correctamente la matriz.
Con esta tarea se mide la capacidad de:
- Razonamiento no verbal inductivo.
- Uso de de estrategias de mediacin verbal que subyacen al etiquetado de las
figuras.
- Anlisis visoespacial.
Semejanzas verbales: El nio ha de decir en qu se parecen o qu tienen en
comn tres cosas. Mide la capacidad de:
- Razonamiento verbal.
- Expresin del lenguaje.
- Conocimiento del vocabulario.
- Conocimiento general.
- Pensamiento lgico y abstracto.
- De distinguir entre caractersticas esenciales y superficiales.
- Estimulacin del lenguaje.
Razonamiento numrico: Es necesario descubrir la relacin existente entre dos
pares de figuras o de nmeros y aplicar la regla para completar el espacio en blanco del tercer
par. Mide la capacidad de:
- Razonamiento inductivo.
- Aptitud analtica.
- Recuperacin de la informacin de la memoria a largo plazo.
- Conocimiento de cifras, de hechos numricos bsicos y de operaciones
aritmticas.
- Uso de estrategias de mediacin verbal.
Emparejamiento de figuras: El sujeto debe elegir una figura que sea idntica a
la que se le presenta entre seis opciones posibles. Los cinco distractores son rotaciones o
inversiones de la figura original. Mide la capacidad de:
- Realizar discriminaciones precisas entre figuras similares.
- Percibir y discriminar la orientacin espacial de las figuras.
- Utilizar estrategias para escudriar y hacer comparaciones visuales.
- Seguir instrucciones verbales y seales visuales.
Dgitos en orden directo: Se tiene que repetir una secuencia de dgitos que son
presentados verbalmente. Con esta tarea se mide la capacidad de:
- Memoria auditiva a corto plazo.
- Facilidad en la expresin verbal.
- Concentracin y atencin.
Dgitos en orden inverso: El nio repite en orden inverso una secuencia de
dgitos que son presentados verbalmente. Evala la capacidad de:
- Utilizar estrategias efectivas para transformar la secuencia de dgitos.
- Memoria auditiva a corto plazo.
978-84-695-8363-0
332
978-84-695-8363-0
333
3:6 y los 5:11 aos, los tests no verbales apropiados para esta finalidad son tres: Semejanzas
grficas (SG), Cubos (CC) y Copia (Co). El conjunto de pruebas no verbales del BAS-II
Escolar est formado por Matrices (M), Razonamiento numrico (RN), Recuerdo de figuras
(RF) y Cubos (CC). Esta combinacin de tests no verbales puede aplicarse, entre otros, a los
siguientes casos: nios extremadamente tmidos, con mudez selectiva, con sospecha de una
prdida auditiva severa, con infecciones recurrentes del odo medio, procedentes de ambientes
familiares carentes de estimulacin verbal o de habla extranjera.
El BAS-II se basa en el supuesto de que la mayora de los nios destacan ms en
algunas aptitudes cognitivas que en otras, por ello permite calcular las diferencias
estadsticamente significativas entre los ndices de aptitud intelectual, entre estos y el IG,
entre los tests propios de cada ndice de aptitud intelectual, entre los tests principales, entre
los tests diagnsticos y entre ambos.
La muestra de tipificacin espaola est formada por 1725 nios, siendo representativa
de la poblacin a la que va dirigida, y asegurando suficientes garantas la calibracin de los
tems de acuerdo al modelo de Rasch. En cuanto a la representatividad, el nmero de casos
por regin, sexo y grupo de edad se ajust en gran medida a los datos del censo. El modelo
psicomtrico de Rasch, es el ms sencillo dentro de las teoras de respuesta al tem, y se basa
en el concepto de que la respuesta correcta a un tem depende de dos aspectos: el nivel de
aptitud de la persona y la dificultad del tem.
Respecto a la fiabilidad del BAS-II, se estudi la consistencia interna u homogeneidad
de su contenido, se realizaron estudios test-retest (con un intervalo aproximado de dos
semanas) y se estudi la especificidad (proporcin de la varianza de las puntuaciones que no
es compartida y se debe nicamente a este test) de las puntuaciones.
978-84-695-8363-0
334
978-84-695-8363-0
335
Elliott, C. D. (1983). The British Ability Scales Manual 2: Technical Handbook. Windsor:
NFER NELSON.
Elliott, C. D. (1996). BAS-II. Escalas de Aptitudes Intelectuales (Arribas, D y Corral. S.
adaptadores). Madrid: TEA Ediciones.
Elliott, C. D. (1996). The British Ability Scales II. Administration and Scoring Manual.
Londres: NFER - NELSON.
Elliott, C. D. (1997). The British Ability Scales II. Technical Manual. Londres: NFER NELSON.
Elliott, C. D. (1997b). BAS-II, British Ability Scales. Administration and Scoring Manual.
Londres: NFER NELSON.
Elliott, C. D., Smith, P. y McCulloch, K. (1997b). BAS-II, British Ability Scales. Technical
Manual. Londres: NFER NELSON.
978-84-695-8363-0
336
Resumen
Los objetivos del estudio son conocer cules son las necesidades existentes en el proceso de
atencin a los estudiantes con discapacidad en las universidades pblicas de Catalua e
identificar propuestas para mejorar la orientacin y apoyo a estos estudiantes. El
procedimiento de recogida de datos se ha realizado a travs de entrevistas en profundidad a
los responsables de los servicios de atencin a la discapacidad de las universidades pblicas
catalanas. Los datos se analizaron mediante el programa de anlisis cualitativo NVivo 10.
Las principales dificultades encontradas se relacionan con la falta de normativa especfica
para realizar adaptaciones equitativas y para reconocer las discapacidades invisibles, y de
conocimiento de la misma por parte del profesorado. Por otra parte, las acciones
transversales y de no diferenciacin que algunas universidades implementan son una buena
prctica para dar visibilidad a la discapacidad, normalizar la situacin de estos estudiantes y
priorizar su autonoma.
Descriptores: Educacin Superior, Discapacidad, Orientacin, Atencin a la diversidad.
Abstract
The aims of this paper are to describe the real needs and difficulties in the process of support
for students with disabilities in Higher Education institutions in Catalonia and to identify
good practices for their attention. The data has been collected through interviews to the
responsible of the disability support services of the public universities in Catalonia. The data
has been analysed using NVivo 10 qualitative software. The main difficulties are the lack of
specific norms for equitable adaptations and to recognize the invisible disabilities, knowledge
of it by professors. Moreover, the transversal measures and non-differentiation that some
universities implement are good practices to give visibility to disability, to normalize the
situation of these students and to prioritize their autonomy.
Keywords: Higher Education, Disability, Guidance, Attention to diversity.
Introduccin
Una de las herramientas que las universidades estn creando e implantando son los
programas y los servicios de atencin a estudiantes con discapacidad. La creacin de estos
servicios implica que los sistemas de Educacin Superior sean atractivos y eficientes
impulsando los planes de apoyo y los servicios de orientacin para mejorar el acceso de los
estudiantes no tradicionales, como son los estudiantes con discapacidad (Consejo de la Unin
978-84-695-8363-0
337
Europea, 2011). Es un forma de que los estudiantes de todo el mundo tengan oportunidades
para acceder a la universidad y a los servicios, programas y actividades que en ella se ofrecen.
Su origen se relaciona directamente con el aumento de la diversidad de estudiantes en la
Educacin Superior y la satisfaccin de las necesidades de los mismos bajo el principio de
igualdad de oportunidades. Entre las funciones generales de estos servicios se encuentran:
asegurar que los recursos necesarios estn disponibles, apoyar al profesorado en la realizacin
de adaptaciones a estos estudiantes y garantizar que la normativa y los procedimientos se
cumplen (Ludeman, Osfield, Iglesias Hidalgo, Oste y Wang, 2009).
Esta iniciativa tambin se ha reflejado en la normativa espaola, ya que incluye el
impulso y fomento de servicios de atencin a la comunidad universitaria con discapacidad
(Real Decreto 1791/2010, de 30 de diciembre, por el que se aprueba el Estatuto del Estudiante
Universitario) para evaluar la necesidad de posibles adaptaciones curriculares, itinerarios o
estudios alternativos (Real Decreto 1393/2007, de 29 de octubre, por el que se establece la
ordenacin de las enseanzas universitarias oficiales). Estos servicios deben ofrecer, entre
otros, orientacin y tutora que mejoren el acceso, la finalizacin de los estudios y la
preparacin de los estudiantes para el mercado laboral (Sursock & Smidt, 2010). A pesar de
ello, se observa una heterogeneidad en la oferta de estos servicios debido a que no existe
regulacin legal de su funcionamiento, estructura, actividades y recursos (Snchez Palomino,
2011). Este hecho tambin se refleja en la determinacin y desarrollo de las adaptaciones
curriculares, la adecuada formacin del profesorado, la falta de conexin entre los
orientadores de los niveles anteriores y la universidad (Castellano Burguillo, Galdn Mangas,
Ipland Garca, Malvrez Pascual y Moya Maya, 2010), y la falta de reconocimiento legal y
real de los derechos de algunas de las necesidades educativas especficas o singulares
derivadas de otras situaciones discapacitantes (Figuera, Coiduras, Feixa, Iss, Prades,
Rodrguez et al., 2010).
Partiendo de que una de las responsabilidades de las instituciones de Educacin
Superior es la proporcin de servicios al estudiante con discapacidad y que existe una
heterogeneidad de medidas y actuaciones a este colectivo, este estudio se centra en (1)
conocer cules son las necesidades existentes en el proceso de atencin a los estudiantes con
discapacidad en las universidades pblicas de Catalua y en (2) identificar propuestas para
mejorar la orientacin y apoyo a estos estudiantes.
Mtodo
Para alcanzar los objetivos del estudio se ha realizado (a) una bsqueda de la
informacin disponible en las Webs institucionales de las universidades pblicas catalanas
sobre sus servicios de atencin a la discapacidad, (b) puesta en contacto con sus responsables,
(c) elaboracin y realizacin de entrevistas en profundidad semiestructuradas (realizadas
durante los meses de junio y julio de 2012, con una duracin aproximada de 45 minutos-1
hora) a los siete responsables de estos servicios, y (d) anlisis de los datos recogidos de la
realizacin de las entrevistas mediante el programa de anlisis cualitativo NVivo 10 teniendo
en cuenta las siguientes categoras: identificacin, estadsticas, demandas y adaptaciones,
barreras, recursos, coordinacin, insercin laboral, normativa, y buenas prcticas y propuestas
de mejora. La muestra ha sido seleccionada de forma intencional, estando formada por los
responsables de los servicios de atencin a la discapacidad de las siete universidades pblicas
catalanas (N=7). Aunque no es una muestra representativa, la heterogeneidad de los
participantes permite comprender en profundidad el fenmeno estudiado y acercarnos a la
realidad que puede resultar del estudio de otras comunidades autnomas.
978-84-695-8363-0
338
Tabla3
Universidades participantes y denominacin del servicio de atencin a los estudiantes con
discapacidad
Universidad
Servicio/programa
Universidad Autnoma de Barcelona
Universidad de Barcelona
Universidad de Girona
Universidad de Lleida
Universidad Politcnica de Catalua
Universidad Pompeu Fabra
Universidad Rovira i Virgili
Resultados
Principales dificultades en el proceso de atencin de los estudiantes con discapacidad
Las principales necesidades que encuentran los responsables de los servicios de
atencin a la discapacidad de las universidades pblicas de Catalua para atender
adecuadamente a los estudiantes con discapacidad se relacionan con las siguientes categoras
extradas del anlisis cualitativo de las entrevistas realizadas a los participantes.
978-84-695-8363-0
339
978-84-695-8363-0
340
A nivel de recursos (13%), los servicios cuentan con algunas ayudas tcnicas en
funcin de la demanda y con la colaboracin de organizaciones y fundaciones que ofrecen
prstamos de productos de apoyo. En muchos casos, los estudiantes requieren de este tipo de
ayudas y no necesitan ms ajustes, sin embargo, otro tipo de recursos son ms difciles de
proporcionar por el alto coste econmico que suponen como son la tercera persona para los
estudiantes con poca autonoma y gran dependencia, y el intrprete de lengua de signos, que
adems conlleva la determinacin de la horas de clase a cubrir con este servicio. Todos los
responsables de los servicios sealan que las medidas de recorte estn afectando en la puesta
en prctica de los planes relativos a la discapacidad y en la provisin de recursos, ya que en la
mayora de los casos no se adquieren nuevos materiales y/o se ha tenido que reformular el
sistema de retribucin de algunos de los programas que ofrecen para que sean viables,
sustituyendo la dotacin econmica por la convalidacin de crditos.
En relacin a la coordinacin (12%) de estas unidades con otros servicios o entidades,
la mayora de los servicios se coordinan en mayor o menor medida con el servicio de
insercin laboral o con asociaciones y servicios de estudiantes de la universidad, sin embargo,
se manifiestan dificultades en estos estudiantes ligadas a la escasa coordinacin previa al
acceso a la universidad entre las instituciones de Educacin Superior y los centros de
Educacin Secundaria.
Por ltimo, los participantes indican que no hay grandes barreras psquicas (a nivel
de integracin) y fsicas (a nivel de accesibilidad) debido a que las universidades han ido
dando mayor importancia al principio de normalizacin y eliminado las barreras
arquitectnicas existentes (8%).
Propuestas para la mejora de la orientacin y apoyo a los estudiantes con discapacidad
En este apartado se especifican actuaciones que mejoran la orientacin y apoyo a estos
estudiantes segn los responsables de los servicios de atencin a la discapacidad. Se han
identificado las siguientes propuestas en relacin a:
A. Identificacin y estadsticas de los estudiantes con discapacidad:
En primer lugar, se destaca la necesidad de registrar y analizar indicadores comunes de
los estudiantes con discapacidad mediante una base de datos que permita realizar un
seguimiento y gestionar toda la informacin relativa a estos estudiantes: estadsticas, tasas de
resultados, actuaciones realizadas, recursos demandados, etc. Para considerar y valorar el
estudio de situaciones y definir cul es la disfuncin que presenta el estudiante, se propone
una escala abierta de acuerdo con la ltima clasificacin de la Organizacin Mundial de la
Salud. Asimismo, se enfatiza en la difusin y orientacin sobre cuestiones relativas a la
discapacidad invisible.
B. Recursos y mecanismos de adaptacin y coordinacin en la atencin a los estudiantes con
discapacidad:
Se proponen actuaciones de formacin y sensibilizacin a toda la comunidad
universitaria con el objetivo de normalizar la situacin de la discapacidad. Es importante que
todas las personas que pertenecen a la universidad conozcan el servicio/programa de atencin
a la discapacidad de la institucin as como los centros de Educacin Secundaria. De esta
manera, se promueve una mayor colaboracin y coordinacin entre estos centros y los
978-84-695-8363-0
341
978-84-695-8363-0
342
normativa, adecuarla a la realidad y mejorar la calidad de la educacin, sera til que las
universidades utilizaran un sistema de indicadores comn que permita conocer la poblacin
real de atencin a la discapacidad, el xito acadmico de estos estudiantes y la demanda de
apoyos y medidas. Por otra parte, las acciones transversales y de no diferenciacin que
algunas universidades estn poniendo en marcha son una buena prctica para dar visibilidad a
la discapacidad, normalizar la situacin de estos estudiantes y priorizar su autonoma.
Referencias
Castellano, E., Galdn, M. O., Ipland, J., Malvrez l, L. y Moya, A. (2010). El derecho de los
estudiantes universitarios con discapacidad a que se realicen las adaptaciones
curriculares que resulten precisas para asegurar el derecho a la igualdad de
oportunidades. Revista Espaola sobre Discapacidad Intelectual, 41(1), 233, 63-82.
Consejo de la Unin Europea (2011). Conclusiones del Consejo sobre el papel de la
educacin y de la formacin en la aplicacin de la Estrategia Europa 2020.(2011/C
70/01).
Figuera, P. (Coord.), Coiduras, J., Feixa, M., Iss, S., Prades, A., Rodrguez, M. L. y Torrado,
M. (2010). La transicin a la universidad de las personas con discapacidad. Madrid:
Ministerio de Educacin. Direccin General de Universidades. Programa Estudios y
Anlisis. Nmero de referencia: EA2009-0104.
Ludeman, R. B., Osfield, K. J., Iglesias Hidalgo, E., Oste, D. y Wang, H. S. (2009). Student
Affairs and Services in Higher Education: Global Foundations, Issues and Best
Practices. Pars: United Nations Educational, Scientific and Cultural Organization.
MEC (2007). Real Decreto 1393/2007, de 29 de octubre, por el que se establece la ordenacin
de las enseanzas universitarias oficiales. Boletn Oficial del Estado, 30/10/2007.
MEC (2010). Real Decreto 1791/2010, de 30 de diciembre, por el que se aprueba el Estatuto
del Estudiante Universitario. Boletn Oficial del Estado, 31/12/2010.
Snchez Palomino, A. (2011). La Universidad de Almera ante la integracin educativa y
social de los estudiantes con discapacidad: ideas y actitudes del personal docente e
investigador. Revista de Educacin, 354, 575-603.
Sursock, A. & Smidt, H. (2010). Trends 2010: A decade of change in European Higher
Education. Bruselas: EUA Publications.
978-84-695-8363-0
343
Resumen
El periodo de la Educacin Secundaria constituye una etapa de vulnerabilidad acadmica
para una gran parte de la poblacin inmigrante. La investigacin parte de la hiptesis que la
superacin de la transicin de riesgo entre la Educacin Secundaria Obligatoria y la
Postobligatoria se podra abordar desde el concepto de resiliencia. El estudio se ha
desarrollado de manera longitudinal durante un ao con una cohorte de 94 estudiantes de 4
Institutos del Barcelons y el Maresme. El seguimiento de los estudios de bachillerato, ciclos
formativos u otras opciones ha sido factible gracias al vnculo y al trabajo colaborativo con
los Institutos. Existe una correlacin significativa entre la permanencia acadmica y la
resiliencia.
Descriptores: Resiliencia, xito escolar, Alumnado inmigrante, Transicin acadmica,
Educacin secundaria obligatoria.
Abstract
The period of secondary education is a period of academic vulnerability for much of the
immigrant population. This research works on the assumption that overcoming the risk
transition between compulsory secondary education and Post-16 education could be
addressed under the concept of resilience. The study was carried out longitudinally for a year
with a cohort of 94 students of 4 high schools from Barcelona and Maresme. The follow-up to
high school, vocational training or other alternatives was possible thanks to the link and
collaborative work with the high schools involved. A significant correlation between retention
and academic resilience appeared.
Keywords: Resilience, School success, Immigrant students, Academic transition, Compulsory
secondary education.
Introduccin
El estudio que se presenta aborda, desde el enfoque de la resiliencia, cmo el
alumnado de procedencia extranjera se enfrenta a una etapa de alto riesgo de abandono
escolar. Actualmente, las causas del fracaso escolar entre los inmigrantes han sido
enormemente estudiadas, mientras que la investigacin del xito en esta poblacin todava es
978-84-695-8363-0
344
muy escasa. La definicin de resiliencia que se adopta en este trabajo tiene un cariz ecolgico
y culturalmente sensible. Es la definicin propuesta por el Resilience Research Centro (RRC)
y acuada por su co-director Michael Ungar:
In the context of exposure to significant adversity, resilience is both the capacity of
individuals to navigate their way to the psychological, social, cultural, and physical
resources that sustain their well-being, and their capacity individually and collectively to
negotiate for these resources to be provided in culturally meaningful ways (Ungar, 2012).
La resiliencia no es una caracterstica esttica, por el contrario, puede cambiar a lo
largo de la vida de un individuo en diferentes situaciones y contextos y puede llegar a ser
evidente a travs de varios patrones (Chi, 2010). Con los aos, el concepto ha sido abordado
desde varias perspectivas. Algunos enfoques tericos centran la atencin en la dualidad
factores de riesgo frente a los factores protectores y, otros en el peso relativo de los
factores externos (micro-macrosocials, econmicos, polticos, etc.) e internos (recursos
internos, calidades intrnsecas de las personas) (Kotliarenco et al., 1997). Otros discursos han
entendido la resiliencia como una construccin social en que sus factores son nicos para cada
contexto (Ungar, 2004). Sin embargo, siempre ha habido cierto consenso en considerarla
como una competencia efectiva de afrontamiento a una situacin de riesgo o adversidad
(Fergus y Zimmerman, 2005; Luthar, 2003; Masten, 2001; Kaplan, 1999; Rutter, 1987).
Indagar ms profundamente sobre las respuestas positivas a los procesos de
vulnerabilidad de los diversos grupos culturales en la etapa ESO-PO complementa la visin
que hoy en da disponemos sobre las trayectorias educativas de la poblacin inmigrante y
puede ayudar a implementar acciones orientadas al xito de estos jvenes. La finalidad de la
investigacin ha sido analizar la relacin entre la resiliencia y el xito acadmico en el
alumnado de procedencia extranjera, entendido como superacin de la transicin de riesgo
ESO-PO.
Mtodo
Este estudio presenta un diseo longitudinal que combina estrategias de recogida de
datos cualitativos y cuantitativas. En un primer momento, el alumnado fue caracterizado
segn varias variables que eran relevantes para el estudio en el ltimo ao de la ESO (fase 1).
Posteriormente, se realiz un seguimiento hasta el primer ao de Postobligatoria (fase 2), con
el doble objetivo de explorar como el alumnado consegua superar un periodo de transicin de
alto riesgo y, de identificar las caractersticas de los que continuaban sus estudios. La
hiptesis sostiene que los que permanecen en el sistema educativo muestran una mayor
resiliencia que aquellos que lo abandonan.
Muestra
El estudio se llev a cabo en cuatro Institutos de Enseanza Secundaria de dos o ms
lneas y de titularidad pblica de la provincia de Barcelona. La seleccin de la muestra fue
hecha mediante un mtodo de muestreo no-probabilstico, teniendo en cuenta la
disponibilidad del instituto para la aplicacin de los instrumentos y las caractersticas del
mismo. De un total de 360 alumnos matriculados en el ltimo curso de ESO (2010-2011) en
estos institutos, el 26,1% eran de origen extranjero. En cuanto al tipo de participantes, se
decidi no concentrar el estudio en grupos culturales especficos. La muestra incluy a todos
los alumnos extranjeros de todos los orgenes culturales (n = 94), con edades comprendidas
978-84-695-8363-0
345
978-84-695-8363-0
346
Tabla 1
Correlaciones estadsticamente significativas
Procedencia
Factores-Dimensiones de la escala de
ili i
S120
S2
S3
S4
F1
F2
F3
F4
F5
F6
F7
F8
F9
F10
F11
F12
R
total
X
X
X
X
X
X
X
X
X
X
X
X
X
X
Conocer personas
con
postobligatoria
X
X
X
X
X
X
X
X
X
Se observa que hay diferencias significativas entre la resiliencia (total y por factores)
de los diferentes participantes de acuerdo con las variables: procedencia, autovaloracin de
los estudios, identidad, mbito de amigos, expectativa de aprobar 4t de ESO, y con el hecho
de conocer personas con estudios postobligatorios completos. No se han detectado diferencias
significativas entre la resiliencia y el resto de variables exploradas: gnero, edad, tiempo de
residencia en Catalua, nivel educativo de los padres y origen de las amistades.
Resiliencia y procedencia cultural del alumnado
El anlisis estadstico de la relacin entre la escala de resiliencia y la procedencia, a
(3, n=83) = 14.5974, p=0.002)
partir de la prueba no paramtrica de Kruskal-Wallis
muestra una diferencia significativa entre la resiliencia media de los participantes procedentes
de las diferentes reas geogrficas. El alumnado procedente de Asia obtiene puntuaciones ms
bajas que sus compaeros de Amrica Latina o el Magreb (Tabla 2).
Tabla 2
Medidas de tendencia central y variabilidad por grupos de procedencia
Amrica Latina
Asia
Asia del Sur
Magreb
20
N
53
6
13
11
Media aritmtica
2.31
1.74
2.01
2.29
Desviacin tpica
0.38
0.32
0.35
0.38
Condiciones de Base (S1), Visin de un mismo (S2), Visin del problema (S3), Respuesta resiliente (S4),
Identidad (F1), Autonoma (F2), Satisfaccin (F3), Pragmatismo (F4), Vnculos (F5), Redes (F6), Modelos (F7),
Metas o Hitos (F8), Afectividad (F9), Autoeficacia (F10), Aprendizaje (F11) y Generatividad (F12).
978-84-695-8363-0
347
Por ltimo, hay que destacar que son significativas las diferencias entre la media de
resiliencia en casi todos los factores y la procedencia del alumnado, salvo los casos
correspondientes a los factores Identidad (F1) y Aprendizaje (F11).
Resiliencia y autopercepcin acadmica
Si nos centramos en la relacin existente entre los factores de la escala de resiliencia y
la variable de autovaloracin de los estudios (Tabla 3) vemos que el factor Identidad (F1) es el
(3, n=88) =
que muestra diferencias estadsticamente significativas Kruskal-Wallis
11.0277, p=0.012). Los jvenes que consideran que van muy bien en los estudios han
obtenido una puntuacin significativamente ms altas en el factor Identidad que los que
consideran que van mal. Por el contrario, en los grupos intermedios no hay mucha diferencia.
Tabla 3
Medidas de tendencia central y variabilidad por autovaloracin de los estudios
Mal
Un poco mal
Bien
Muy bien
N
6
27
44
11
Media
1.72
2.32
2.13
2.67
Desviacin tpica
0.85
0.46
0.60
0.45
978-84-695-8363-0
348
Se observa en casi todos los casos que el alumnado con puntuaciones inferiores en
resiliencia son quienes no tienen claro si aprobarn o no, excepto en el factor Metas (F8) en
el que, aquellos sin un futuro claro obtienen un nivel menor. En la tabla 5 destacamos todos
los factores que, segn esta investigacin, correlacionan con las expectativas de aprobar. Los
factores corresponden fundamentalmente con la competencia definida por Grotberg (1995)
como Yo tengo y a la dimensin Respuesta resiliente de Saavedra y Villalta (2008). Por
lo tanto, el hecho que los alumnos tengan Vnculos, Redes, Modelos y Metas
correlaciona con respuestas ms resilientes. Tambin hay que destacar el rol que juegan las
habilidades que tiene el alumnado para relacionarse y resolver problemas, es decir, el yo
puedo de la propuesta de Grotberg (1995).
Tabla 1
Factores de resiliencia por expectativas de aprobar 4 de ESO
Estructuracin de la conciencia (Saavedra y Villalta, 2008)
Condiciones
Visin de un
Visin del
Respuesta
Competencias interaccin
de base
mismo
problema
resiliente
Grotberg (1995)
Yo soy
Yo estoy
Yo tengo
Yo pue do
F1: Identidad
F2: Autonoma
F3: Satisfaccin
F5: Vnculos
F9:
Afectividad
F6: Redes
F10:
Autoeficacia
F7: Modelos
F11:
Aprendizaje
F4:
Pragmatismo
F8: Metas
F12:
Generatividad
La transicin ESO-postobligatoria
A continuacin, se presentan los resultados obtenidos con relacin a la transicin
acadmica de los alumnos del cuarto curso de la ESO a la postobligatoria. Un 61% del
alumnado de la muestra ha continuado estudios y un 19% ha repetido el cuarto curso. Todo
ello, muestra una continuidad acadmica de un 80%, un tanto por ciento bastante elevado, si
tenemos en cuenta los resultados otras investigaciones. El abandono es de un 13%, y hay un
7% de los que no se han podido obtener datos.
Tabla 2
Continuidad acadmica de la muestra del alumnado de 4 de ESO
Siguen PO
Repiten
Abandonan
No se conoce
Total
Amrica Latina
32 (36%)
10 (11%)
8 (9%)
3 (3%)
53 (60%)
Asia
2 (2%)
1 (1%)
3 (3%)
1 (1%)
7 (8%)
Magreb
8 (9%)
1 (1%)
1 (1%)
1 (1%)
11 (12%)
Otros
4 (4%)
1 (1%)
5 (6%)
Total
54 (61%)
17 (19%)
12 (13%)
6 (7%)
89 (100%)
978-84-695-8363-0
349
No
1
3
S, seguro
1
2
0
4
14
32
36
39
0
5
49
68
978-84-695-8363-0
350
978-84-695-8363-0
351
978-84-695-8363-0
352
Resumen
El presente comunicado describe parte de una investigacin, ms amplia y an en desarrollo,
en la cual se estudia y analiza la asamblea de aula (Prez, 2001) como herramienta de
prevencin y resolucin de conflictos con menores en dificultad social. El grupo de estudio
corresponde a un aula que forma parte del programa ProInfancia (Obra Social La Caixa)
desarrollado por Save the Children Valencia. Se utiliza de modo complementario la
perspectiva cualitativa y cuantitativa, presentando los resultados obtenidos de la primera
parte del estudio, en base a la perspectiva del equipo educativo del programa en el municipio
de Paterna (Valencia). Mediante el anlisis de grupos de discusin (Krueger, 1991; Morgan,
1998), los resultados muestran que el equipo educativo tiene una alta predisposicin a
emplear la asamblea de aula como herramienta para mejorar la convivencia escolar, ya que
se han conseguido resultados satisfactorios de acuerdo a una escala de Clima Social Aula
(Prez, Ramos y Lpez, 2009) en uno de los grupos donde ya se ha implementado dicha
herramienta.
Descriptores: Umbral de pobreza, Asamblea de aula, Save the Children, Apoyo escolar,
Conflicto, Dificultad social, Convivencia escolar e intercultural.
Abstract
This paper describes part of one investigation, more wide and yet developing, in which
studies and analyzes the classroom assembly (Prez, 2001) as tool to prevent and resolution
the conflicts with children under in social difficulties. The study group corresponds a
classroom that is part of the ProInfancia program (Obra Social La Caixa) developed by Save
the Children Valencia. Is used in a complementary way the qualitative and quantitative
perspective, presenting the results of the first part of the study, based on the perspective of the
programs educational team in the Paterna municipality (Valencia). By analyzing focus
groups (Krueger, 1991; Morgan, 1998), the results show that the educational team has a high
willingness to use the classroom assembly as tool to improve the scholar coexistence, since
they have succeeded satisfactory results in accordance to the Clima Social Aula scale (Prez,
Ramos y Lpez, 2009) in one of the groups which already has implemented this tool.
Keywords: Poverty, Classroom assembly, Save the Children, School support, Conflict, Social
difficulties, Scholar and intercultural coexistence.
978-84-695-8363-0
353
Introduccin
El uso total de la palabra para todos me parece un buen lema de bello sonido
democrtico, no para que todos sean artistas, sino para que nadie sea esclavo (Rodari,
1976, p. 9). La presente investigacin tiene como propsito implantar la asamblea de aula
como herramienta para la mejora de la convivencia escolar en un aula de apoyo educativo de
Save The Children, Valencia en el municipio de Paterna. Dicha investigacin surge de la
evaluacin inicial del clima de aula mediante una escala de Prez, Ramos y Lpez (2009), en
la cual se ha detectado que los conflictos en el aula y los problemas de convivencia son
habituales y por ello, se ha considerado adecuado implantar la presente iniciativa para crear
un espacio de dilogo y de confianza, un espacio donde prevenir y resolver conflictos de
forma pacfica. Por todo ello, resulta imprescindible comenzar por justificar la importancia de
la participacin, del dilogo y de la ciudadana en la sociedad.
En primer lugar, cabe destacar que en la actualidad, la finalidad de la educacin que
plantean los diferentes marcos tericos estatales, est estrechamente ligada con el informe
elaborado por la UNESCO, la Comisin Internacional sobre Educacin para el siglo XXI
(Delors, et al., 1996), basado en cuatro pilares esenciales del aprendizaje: aprender a conocer,
aprender a hacer, aprender a vivir juntos y aprender a ser. No cabe duda que las
administraciones pblicas ya han emprendido nuevas apuestas por una educacin integral de
las personas, fundamental para conseguir una mejor convivencia social y pretenden preparar
al alumnado de las escuelas e institutos a ser buenos ciudadanos y habitantes del mundo. Pero,
sin duda, estos pilares an no estn presentes, todava no son una realidad.
En la intervencin e investigacin que se plantea en la presente comunicacin, se
aborda esta realidad y se propone una estrategia para mejorar la participacin y el dilogo en
el aula. Apoyndonos en que la participacin es puede ser- la clave de una ciudadana ms
democrtica en un mundo que, para afrontar sus problemas, exige cada vez ms la
implicacin de todos sus habitantes (Garca, 2009, p. 5).
Pero debemos ser conscientes de que no nacemos sabiendo participar, o sabiendo vivir
en democracia. A participar se aprende, al igual que se aprende a dialogar, a convivir y a
respetar las normas que guan la sociedad o la escuela (Prez, 2001). Por tanto, como
profesionales de la educacin, debemos apostar por la escuela como un espacio idneo para
aprender a participar y a convivir. El aula es un lugar maravilloso para poder ejercer la
democracia, para opinar, entender, aprender a escuchar, a pedir perdn y a perdonar. Por
tanto, podemos afirmar que la educacin para la participacin es imprescindible que se
plantee como uno de los objetivos prioritarios en la escuela, por el mero hecho de que slo as
podremos llegar a ser ciudadanos y ciudadanas ms libres y ms felices.
En esta misma lnea, cabe destacar que la participacin se debe ensear desde la
experimentacin, se debe vivir. Ya que es la nica manera de aprender, asimilar e incorporarla
a travs de la prctica cotidiana y real de la experiencia. Por ello, como profesionales,
debemos abrir la escuela a la participacin, hacer a los nios y a las nias partcipes de la
responsabilidad de su gestin, darles la palabra y comprometernos a escucharla (Tonucci,
2009, p. 19).
En otro orden de cosas, la participacin nos lleva sin duda a reflexionar sobre la
ciudadana, a creer en escuelas donde los nios y las nias sean reconocidos como ciudadanos
y ciudadanas. Demos crear situaciones y espacios en los que se enfrenten directamente a vivir
978-84-695-8363-0
354
978-84-695-8363-0
355
978-84-695-8363-0
356
Diseo
Con la finalidad de evaluar la efectividad de dicho proyecto y si la implantacin de la
asamblea de aula mejora la convivencia escolar, se apuesta por la complementariedad
metodolgica, utilizando principalmente la metodologa cualitativa, pero apoyndonos
tambin en la cuantitativa (Scriven, 1967).
Consideramos la complementariedad metodolgica fundamental para poder garantizar
un mayor y mejor acercamiento a la realidad estudiada, ya que parece viable combinar la
metodologa cualitativa y la cuantitativa dentro de una misma investigacin, de manera que se
pueda sostener la complementariedad entre mtodos (Bericat, 1998).
Instrumentos
A)
Escala de Clima Social Aula dirigida al alumnado de primaria (Prez, Ramos y Lpez,
2009), que han cumplimentado los nios y las nias del aula objeto de estudio, con la
finalidad de valorar la convivencia escolar antes de implantar la asamblea de aula. A travs de
dicha escala, se pueden observar las relaciones que existen entre el alumnado y de cara al
profesorado. Los datos obtenidos se han analizado a partir de la estadstica descriptiva e
inferencial, con apoyo del software SPSS (Statistical Package for Social Sciences, versin
19).
B)
Grupo de discusin (Krueger, 1991; Morgan, 1998), en el que han participado cinco
componentes del equipo educativo del programa Caixa ProInfancia, siendo una de ellas la
moderadora. Asimismo, se ha realizado un anlisis de contenido mediante el establecimiento
de un sistema categorial inductivo a travs del estudio de las unidades que comparten
significados afines (Bardn, 1986) en base a las intervenciones realizadas por las participantes.
Las categoras sern establecidas posteriormente, ya que no se cuenta con un sistema
categorial previo. Ser la lectura y relectura de la transcripcin del grupo de discusin la que
permitir el establecimiento de categoras de inters. Por tanto, cabe hacer referencia que
estamos hablando de un marco flexible, propio del enfoque cualitativo.
Resultados
El presente apartado se dividir en dos sub-apartados, con la finalidad de facilitar la
comprensin de los resultados. En primer lugar, se exponen los resultados derivados del
grupo de discusin que se ha realizado, en el cual ha participado el equipo educativo de Save
The Children Paterna. Por otra parte, a continuacin se expondrn los resultados derivados del
anlisis de datos de la Escala de Clima Social de Aula.
Grupo de discusin
Despus de leer y releer la transcripcin del grupo de discusin en el que ha
participado el equipo educativo de Save The Children, se han establecido diversas categoras
a travs del anlisis de contenido mediante un sistema categorial inductivo de la informacin.
Todas ellas estn plenamente relacionadas, por ello resulta interesante exponer el mapa
conceptual que a continuacin se adjunta. Cabe destacar que el grupo de discusin se inici
en torno a una nica pregunta: Consideris adecuada la utilizacin de la asamblea de aula
como herramienta para la mejora de la convivencia escolar en el aula de apoyo educativo de
Save The Children Paterna?
978-84-695-8363-0
357
978-84-695-8363-0
358
ellos hayan visto o todas las ideas que hayan tenido, tienen la seguridad de que las vamos a
hablar.
En esta misma lnea, las educadoras han demostrado a travs del grupo de discusin, la
importancia de que los nios y nias adquieran responsabilidades. Ven la asamblea de aula
como un espacio en el cual tiene cabida esta tarea. De ah ha surgido una nueva categora,
adquisicin de responsabilidades. Todas las educadoras coinciden en que la asamblea
proporciona formacin y madurez al alumnado y por tanto, potencia que empiecen a
encargarse de tareas en las que ellos y ellos son los responsables de su ejecucin. (7) Tambin
ellos cogen responsabilidad, se sienten los protagonistas, se toman en serio las propuestas y
las felicitaciones.
Otra de las categoras que se ha establecido derivada de la reagrupacin de varias
afirmaciones por parte de las participantes referentes al tema, es la falta de formacin del
profesorado. Todas ellas han coincidido en la necesidad que personalmente y en general
tienen de saber y conocer cmo funciona la asamblea de aula, en qu teoras y en qu tcnicas
se apoya para poder ejecutarla sabiendo su funcionamiento. (8) A lo mejor me faltan recursos,
no s cmo se plantea la asamblea, porque no tengo unas pautas. (9) Igual es lo que
hablabais y es porque a Roco le faltan herramientas (10) Porque a lo mejor les falta
formacin para hacerlo bien, a lo mejor hacen un tipo de asamblea que sirve pero no llega a
los objetivos que te planteas al inicio, porque en algn momento no saben cmo seguir.
Por tanto, podemos comprobar que s que hay una predisposicin por parte de las
educadoras a emplear dicha herramienta, ya que dos de ellas la estn utilizando pero desde su
punto de vista, sin estar formadas para ello. Cabe destacar que la predisposicin vara de
acuerdo con la experiencia que cada una de ellas ha tenido en el aula. Ya que dos de ellas
estn plenamente seguras de que es una herramienta que mejora la convivencia en el aula,
pero una de las educadoras considera que es complicado establecer la asamblea, ya que ella lo
ha intentado y los resultados no han sido positivos. (11) Yo he intentado hacer la asamblea de
aula y siempre ha sido un desastre. (12) Yo lo suelo intentar igualcada dos semanas, cada
tres semanas un rato. Vamos a hacer algo importante, pues vamos a intentar a hablar por
ah, qu les motiva, pero nada
Aun as, ella misma reconoce en la conversacin que le faltan herramientas,
formacin, porque en ocasiones no sabe cmo iniciar la asamblea, cmo plantearla en el aula
para que los nios y las nias respondan con inters.
Escala Clima Social Aula
A continuacin se analizan los resultados que se han obtenido a partir de los datos de
la Escala de Clima Social de Aula. Como podemos comprobar en el grfico 5, 12 de 14 nios
y nias del aula, afirman que los profesores siempre se interesan por cada uno de los alumnos
y alumnas, mientras que 2 consideran que slo a veces lo hacen. En esta misma lnea, 10
dicen que los profesores siempre muestran respeto hacia sus sentimientos, mientras que 4
afirman que slo lo hacen a veces. Por ello, si analizamos el grfico 6, los resultados son
diversos. 6 nios no estn contentos de su clase, en cambio 3 si, 4 no se sienten orgullosos de
ella, en cambio 5 si y 5 consideran que su clase no es un lugar agradable, en cabio 4 s. El
resto de nios y nias opinan que a veces, o que bastantes veces.
978-84-695-8363-0
359
978-84-695-8363-0
360
En referencia al comportamiento del alumnado (grfico 8), los datos varan. Slo 1
nio o nia considera que los nios y nias del aula siempre se llevan bien, mientras que 7
consideran que slo se llevan bien a veces, 3 afirman que nunca y 3 que bastantes veces. En
relacin a la colaboracin entre el alumnado del aula, 3 afirman que nunca colaboraran entre
ellos, 6 que lo hacen a veces, 4 bastantes veces y uno que siempre.
Discusin
La sociedad actual ya es multicultural, es una sociedad en la que viven personas con
distintas identidades, distintos orgenes culturales, rasgos, caractersticas y tambin
posibilidades. Debemos sealar que en la actualidad, las teoras ms relevantes a nivel
internacional en Ciencias Sociales y de la Educacin estn aportando elementos tericos y
datos empricos que demuestran la posibilidad de una convivencia pacfica basada en la
igualdad de las diferencias, el dilogo igualitario y el enriquecimiento social que representa la
convivencia intercultural (Flecha 1997, Habermas 1981, Touraine 1997).
Por todo ello, dicha investigacin tiene, entre otras, la finalidad de convertir estas
diferencias en motores de cambio, en herramientas que potencien la construccin de una
978-84-695-8363-0
361
978-84-695-8363-0
362
Morgan, D.L. (1991). The Focus Groups Guide Book. Newbury Park: Sage.
Nuez, C., y Corts, P. (2007). El Grcia. Cuaderns Digitals.
Prez, C. (2001). Estrategias para la solucin de conflictos en el aula. Revista Espaola de
Pedagoga, 218, 143 - 156.
Prez, A., Ramos, G., y Lpez, E. (2009). Diseo y anlisis de una escala para la valoracin
de la variable clima social aula en alumnos de Educacin Primaria y Secundaria. Revista
de Educacin, 350, 221-252.
Rodari, G. (1976). Gramtica de la fantasa. Barcelona: Avance.
Snchez, S. (2008). La asamblea de clase para la didctica de la lengua oral en el segundo
ciclo de la educacin infantil. Espaa: Universidad de Cantabria.
Scriven, M. (1967). The methodology of evaluation. Chicago: MCNALLY.
Tonucci, F. (2009). Se puede ensear la participacin? Se puede ensear la democracia?
Investigacin en la escuela, 68, 11-24.
Touraine, A. (1997). Podemos vivir juntos? Iguales y diferentes. Madrid: PPC.
978-84-695-8363-0
363
Resumen
La Recomendacin Rec (2006/19) del Consejo de Europa sobre Polticas de Apoyo al
Ejercicio Positivo de la Parentalidad, recuerda a las familias y a los poderes pblicos la
obligacin de garantizar los derechos del nio y su pleno desarrollo. Asimismo, recomienda
a gobiernos y personas con responsabilidades educativas, ayudar a los padres a travs de
polticas y programas. En esta comunicacin, se presenta un estudio de campo de carcter
exploratorio realizado aplicando un cuestionario a una muestra de 1006 padres y madres.
Analiza las estrategias de resolucin de conflictos de 1006 padres y madres con sus hijos/as.
Se muestran resultados descriptivos y predictivos sobre estas estrategias y una sntesis de las
diferencias estadsticamente significativas encontradas en funcin de variables sociodemogrficas. Se deduce la conveniencia de promover programas educativos que faciliten a
los padres y madres desarrollar estrategias de comunicacin asertiva y de negociacin con
sus hijos/as para resolver los conflictos.
Descriptores: Parentalidad positiva, resolucin de conflictos, convivencia familiar.
Abstract
The Council of Europe Recommendation Rec 2006/19 on Policies to Support Positive
Parenting reminds families and public authorities a duty to ensure childrens rights and their
full development. It also recommends that governments and people with educational
responsibilities help parents through policies and programs. In this paper, we present a study
of an exploratory field by applying a questionnaire to a sample of 1006 parents. Analyzes
conflict resolution strategies of 1006 parents with their sons/daughters. We present
descriptive and predictive results of these strategies and a summary of the statistically
significant differences found in terms of socio-demographic variables. It follows the
desirability of promoting educational programs that facilitate parents to develop assertive
communication strategies and negotiation with their sons/daughters to resolve conflicts.
Keywords: Positive parenting, conflicts resolution, family life.
Introduccin
En el momento actual la familia no es ajena a los cambios econmicos, polticos y
sociales que estn afectando a la mayora de los pases del mundo occidental, que se traducen
en una recesin econmica y como consecuencia en cambios en el estilo de vida de las
978-84-695-8363-0
364
978-84-695-8363-0
365
su propia vida y puedan alcanzar los mejores logros tanto en el mbito familiar como
acadmico, con los amigos y en el entorno social y comunitario (p: 2).
Esta Recomendacin recuerda a los Estados Miembros de la Unin Europea que han
de proporcionar a los padres los apoyos y recursos que precisen para cumplir con la
responsabilidad de criar y educar a sus hijos desde un enfoque positivo y estimulador, que
incluya normas y lmites para favorecer el progresivo desarrollo de la autonoma personal y el
control de la propia vida en los distintos contextos en los que transcurre el ciclo vital de la
persona. De este modo, los padres, en colaboracin con el resto de los sectores sociales
podrn contribuir a mejorar la convivencia familiar, proteger los derechos de los nios, y
construir una sociedad ms prspera.
La Tabla 1 recoge las actuaciones parentales positivas que la Recomendacin 19/2006
del Consejo de Europa destaca por sus efectos beneficiosos sobre el desarrollo de los nios.
Tabla 1
Actuaciones parentales positivas que destacan las Recomendaciones del Consejo de Europa por
sus efectos beneficiosos sobre el desarrollo de los nios
Actuaciones parentales positivas que destacan las Recomendaciones del Consejo de Europa por sus
efectos beneficiosos sobre el desarrollo de los nios
Proporcionar afecto y apoyo.
Dedicar tiempo para interaccionar con los hijos.
Comprender las caractersticas evolutivas y de comportamiento de los hijos a una edad
determinada.
Establecer lmites y normas para orientar el adecuado comportamiento de los hijos y generar
expectativas de que cooperarn en su cumplimiento.
Comunicarse abiertamente con los hijos, escuchar y respetar sus puntos de vista, y promover
su participacin en la toma de decisiones y en las dinmicas familiares.
Reaccionar ante sus comportamientos inadecuados proporcionando consecuencias y
explicaciones coherentes y evitando castigos violentos o desproporcionados.
Fuente: Martnez Gonzlez (2008) adaptada del Council of Europe Document: Recommendation Rec
(2006/19) of the Committee of Ministers to Member States on Policy to Support Positive Parenting
(Adopted by the Committee of Ministers on 13 December 2006 at the 983rd Meeting of the Ministers
Deputies)
978-84-695-8363-0
366
Mtodo
La investigacin se ha llevado a cabo a travs una metodologa de estudio de campo
de carcter exploratorio, que ha posibilitado determinar las necesidades y preocupaciones de
las familias en materia de estrategias para afrontar los conflictos con sus hijos. Para recogida
de informacin se ha utilizado adems de la observacin participante, los grupos de discusin
y los autoinformes, un cuestionario de respuestas escalares tipo Likert ordenadas conforme a
la escala: 1-Totalmente en desacuerdo; 2-Desacuerdo; 3-Acuerdo y 4-Totalmente de acuerdo.
La muestra est integrada por 1006 padres y madres del Principado de Asturias, con
hijos escolarizados en Educacin Infantil, Primaria y Secundaria. Dichas familias, han sido
seleccionadas a travs de un procedimiento de muestreo no probabilstico de carcter
incidental, entre personas tanto de zonas urbanas como rurales que han participado en el
estudio voluntariamente.
Las variables analizadas, adems de las referidas a las caractersticas sociodemogrficas
de los padres y madres, han sido aquellas relativas a estrategias de resolucin de conflictos y
negociacin en el mbito familiar. En concreto, las variables estudiadas hacen referencia a si
los padres y madres:
a) Cuando otras personas intentan imponerse, piensan que lo mejor es imponerse
tambin para controlar la situacin.
b) Cuando surgen conflictos con las personas piensan que lo mejor es hablar con ellas
para encontrar entre todos la mejor solucin.
c) Suele mantenerse firme para que se cumplan las consecuencias pactadas cuando las
personas no cumplen con sus obligaciones.
d) Tienen informacin adecuada sobre cmo llegar a acuerdos con las personas para
solucionar problemas.
e) Se imponen para controlar la situacin cuando sus hijos/as intentan salirse con la
suya.
f) Ante un problema o conflicto les dicen a sus hijos/as lo que hay que hacer y se
termina el problema.
g) Cuando sus hijos/as no hace las tareas que le corresponden, estos han de asumir unas
consecuencias o castigos.
h) Suelen imponerse para solucionar la situacin en aquellos casos en que sus hijos/as
les desobedece.
i) Suelen mantenerse firme a la hora de cumplir lo que ha prometido hacer cuando sus
hijo/as no cumplen con sus obligaciones.
j) Saben cmo llegar a acuerdos con sus hijos/as para solucionar los problemas que
puedan surgir.
978-84-695-8363-0
367
978-84-695-8363-0
368
978-84-695-8363-0
369
madres saben llegar a acuerdos con sus hijos/as para solucionar los problemas que puedan
surgir (69,3%).
En consonancia con los datos obtenidos, parece existir una disparidad entre lo que es
valorado por los padres y madres como positivo y eficaz para resolver conflictos (el dilogo y
la negociacin) y lo que algunos de ellos practican realmente en su vida cotidiana (estrategias
impositivas y punitivas). La aparente contradiccin que hemos descrito puede explicarse
teniendo en cuenta que las personas cada vez poseen ms informacin sobre estos temas,
aunque les falta formacin en estrategias concretas que les facilite el desarrollo de la
parentalidad positiva, entrenando estas habilidades para que formen parte de su repertorio
habitual de conductas. Por ello consideramos imprescindible informar y formar a los padres y
madres en estos aspectos, asesorndoles en el dilogo con sus hijos/as, a la vez que se trabajan
de forma paralela los procesos de negociacin y la aplicacin de consecuencias lgicas.
Tabla 2
Porcentaje de acuerdo y desacuerdo y medidas de tendencia central y dispersin. Dimensin:
Estrategias de resolucin de conflictos y negociacin
[1]
Variables
TD
TA
Media
Sx
5,2%
12,0%
40,9%
41,9%
990
3,20
,841
1,3%
2,3%
31,5%
64,9%
998
3,60
,604
3,7%
18,7%
51,9%
25,8%
997
3,00
,770
3,7%
21,7%
56,9%
17,6%
994
2,88
,728
6,8%
22,7%
50,7%
19,8%
984
2,84
,819
12,1%
39,1%
38,2%
10,6%
979
2,47
,839
5,4%
12,3%
52,1%
30,1%
982
3,07
,798
13,7%
36,5%
35,8%
13,9%
985
2,50
,896
Suele
imponerse
para
978-84-695-8363-0
370
solucionar la situacin en
aquellos casos en que sus
hijos/as les desobedece
Suele mantenerse firme a la
hora de cumplir lo que ha
prometido hacer cuando sus
hijo/as no cumplen con sus
obligaciones
4,4%
22,9%
50,7%
22,0%
982
2,90
,785
6,5%
24,3%
51,8%
17,5%
991
2,80
,799
Referencias
Ayuso, L. (2010). Juventud y familia en los comienzos del siglo XXI. En J. M. GonzlezAnleo y col, Jvenes espaoles 2010. Madrid: Fundacin Santamara.
Collins, W.A. (1997). Relationships and development during adolescence: Interpersonal
adaptation to individual change. Personal Relationships, 4, 1-14.
Consejo de Europa (2006). Recommendation Rec (2006) 19 of the Committee of Ministers to
member states on policy to support positive parenting. Explanatory Report.
Estrasburgo: Consejo de Europa.
Del Valle, A.I. (1994). Vida cotidiana y relaciones sociales. En J. Elzo, F.A. Orizo, P.
Gonzlez y A.I. Del Valle (Eds.), Jvenes espaoles 94. Madrid: Fundacin
Santamara.
Fuentes, M.J., Motrico, E. y Bersab, R. (2003). Estrategias de socializacin de los padres y
conflictos entre padres e hijos en la adolescencia. Anuario de Psicologa, 34(3), 385400.
GonzlezAnleo, J.M. y col. (2010). Jvenes espaoles 2010. Madrid: Fundacin Santamara.
Laparra, M. y Prez, B. (Coord.) (2012). Crisis y fractura social en Europa. Causas y efectos
en Espaa. Barcelona: Obra Social La Caixa.
Laursen, B., Coy, K.C. y Collins, W.A. (1998). Reconsidering changes in parent-child
conflict across adolescence: A meta-analysis. Child Development, 69, 817-832.
Martnez Gonzlez, R. A. (2008). Educacin para la Convivencia desde el mbito Familiar.
Ponencia presentada en el XIV Congreso Nacional y III Iberoamericano de Pedagoga:
Educacin, Ciudadana y Convivencia. Diversidad y Sentido Social de la Educacin.
Seccin: Familia, Sociedad y Redes de Comunicacin. Zaragoza, 17-20 Septiembre.
978-84-695-8363-0
371
Villar, O., Luengo, M.A., Gmez, J.A. y Romero, E. (2003). Una propuesta de evaluacin de
variables familiares en la prevencin de la conducta problema en la adolescencia.
Psicothema, 15(4), 581-588.
Woolcok y Narayan (2010). Capital social: Implicaciones para la teora, la investigacin y las
polticas sobre desarrollo (Consultado en http://preval.org/documentos/00418.pdf;
20/04/2013).
978-84-695-8363-0
372
Resumen
La atencin al alumnado con necesidades de compensacin educativa se viene realizando en
los centros escolares que desarrollan actuaciones que permiten prevenir y compensar las
desigualdades educativas con el fin de que este alumnado, a travs de estas acciones, pueda
hacer efectivo el principio de igualdad en el ejercicio del derecho a la educacin. En esta
comunicacin se reflejan parte de los resultados del estudio realizado sobre el alumnado de
los centros de compensacin educativa de la provincia de Alicante. Para ello se encuest a
los alumnos de sexto curso de educacin primaria acerca de las caractersticas socio
familiares de la unidad familiar en la que viven, su historia escolar y la ocupacin que hacen
del tiempo libre, y tambin se recabaron datos de opinin y valoracin sobre ellos mismos,
acerca de sus grupos de referencia y de su entorno ms cercano. En relacin a los resultados
se presentan los datos de forma global considerando los resultados de todos los centros de
compensacin educativa estudiados, y tambin se analizan los mismos realizando una
comparacin entre las dos modalidades de compensacin educativa estudiadas, la del
alumnado que cursa en los Centros de Accin Educativa Singular (CAES) y el alumnado de
los colegios que desarrollan Programas de compensacin educativa, detectndose algunas
diferencias significativas entre estos grupos.
Descriptores: Identidad, diversidad, equidad y globalidad en educacin.
Abstract
With needs of educational compensation one comes the attention to the student body realizing
in the school centers that they develop actions that allow to anticipate and to compensate the
educational desigualdades in order which this student body, across these actions, could make
the beginning of equality effective in the exercise of the right to the education. In this
communication they reflect part of the results of the study realized on the student body of the
centers of educational compensation of the province of Alicante. For it there were polled the
pupils of sixth course of primary education partner brings over of the characteristics relatives
of the familiar unit in which they live, his school history and the occupation that they do of the
free time, and also there were obtained information of opinion and valuation on them
themselves, it brings over of his groups of reference and of his more nearby environment. In
relation to the results they present the information of global form considering to be the results
of all the studied centers of compensation educational, and also the same ones are analyzed
realizing a comparison between both studied modalities of educational compensation, that of
the student body that it deals in the Centers of Educational Singular Action and the student
body of the colleges that develop Programs of educational compensation, there being
detected some significant differences between these groups.
Keywords: Identity, diversity, equity and globalization in education.
978-84-695-8363-0
373
Introduccin
Desde 1983 la Conselleria de Educacin ha venido desarrollando actuaciones de
carcter compensador para el alumnado en situacin de desventaja por razones de capacidad
econmica, nivel social o lugar de residencia, pero la aplicacin de la LOGSE, y con la
finalidad de adecuar las actuaciones de compensacin educativa que venan realizndose en
los centros docentes sostenidos con fondos pblicos al nuevo sistema educativo, se aprueba la
Orden de 4 de julio de 2001, de la Conselleria de Cultura y Educacin, que regula la atencin
al alumnado con necesidades de compensacin educativa. La Orden es de aplicacin en los
centros docentes pblicos y privados concertados, ubicados en la Comunidad Valenciana, que
atienden alumnado con necesidades de compensacin educativa de Educacin Infantil
(segundo ciclo), Educacin Primaria y Educacin Secundaria Obligatoria.
Se considera alumnado con necesidades de compensacin educativa aquel que
presenta dificultades de insercin escolar por encontrarse en situacin desfavorable, derivada
de circunstancias sociales, econmicas, culturales, tnicas o personales. Estas necesidades de
compensacin educativa pueden deberse a diversas causas: incorporacin tarda al sistema
educativo; retraso en la escolarizacin o desconocimiento de los idiomas oficiales de la
Comunidad Valenciana por ser inmigrante o refugiado; pertenencia a minoras tnicas o
culturales en situacin de desventaja social; escolarizacin irregular, por itinerancia familiar o
por abandonos educativos reiterados o peridicos; residencia en zonas social, cultural o
econmicamente desfavorecidas; dependencia de instituciones de proteccin social del menor;
internamiento en hospitales o en hospitalizacin domiciliaria de larga duracin por
prescripcin facultativa; e inadaptaciones al medio escolar y al entorno educativo.
A efectos de las actuaciones de Compensacin educativa, los centros docentes tienen
la siguiente consideracin:
a) Los centros docentes ubicados en un Barrio de Accin Preferente (BAP) o que escolaricen
alumnado con necesidades de compensacin educativa en un porcentaje igual o superior al
30% del total del centro, se considerarn Centros de Accin Educativa Singular (CAES).
Estos centros realizarn ajustes organizativos y adaptaciones curriculares para el conjunto de
su alumnado.
b) Los centros docentes que escolaricen entre un 20% y un 30% de este alumnado en el nivel
o etapa correspondiente, desarrollarn un Programa de Compensacin Educativa. Este
Programa incluir actuaciones de acogida y acercamiento a las familias, as como medidas
organizativas y curriculares para el alumnado que las necesite.
c) Cuando el porcentaje sea inferior, el centro docente adoptar, de forma planificada, las
medidas educativas adecuadas para atender las necesidades de este alumnado. Estos centros
planificarn intervenciones de atencin individualizada para la acogida, el acercamiento a las
familias y la integracin educativa del alumnado que lo requiera
978-84-695-8363-0
374
Mtodo
Participantes
La investigacin abarca a los centros educativos con compensacin educativa de la
provincia de Alicante, en concreto a los Centros de Accin Educativa Singular (CAES) y a los
centros que desarrollan Programas de Compensacin Educativa. La poblacin objeto de
estudio est constituida por el alumnado de 6 curso de educacin primaria de los mismos.
Instrumentos
El cuestionario de Alumnos recoge los datos relativos a las caractersticas familiares y
escolares del alumno y datos de opinin sobre s mismo, su grupo y su entorno.
En su elaboracin se ha utilizado como referencia el cuestionario de contexto del
estudio Evaluacin de la Educacin Primaria 2003, realizado por el Instituto Nacional de
Evaluacin y Calidad del Sistema Educativo del Ministerio de Educacin y Ciencia (INCE,
2005).
Estructura del cuestionario: El cuestionario est integrado por 116 preguntas cerradas
y 6 preguntas abiertas, en las que se recogen diferentes tipos de datos:
a) Datos demogrficos, relativos al sexo, la edad, el lugar de nacimiento y los aos de
residencia en la Comunidad Valenciana.
b) Datos familiares, sobre la estructura familiar, el nivel sociocultural y la implicacin de los
padres en la formacin de sus hijos.
c) Datos sobre la historia escolar, el uso del tiempo libre y valoraciones personales del
alumno.
Procedimiento
Para la seleccin de la muestra se utiliz un mtodo de muestreo no probabilstico, que
consiste en extraer las unidades muestrales con criterios diferentes a los de la aleatorizacin,
como la conveniencia u otros criterios subjetivos (Cea, 1998).
Decidimos encuestar al alumnado de 6 curso de Educacin Primaria de los 33 centros
seleccionados, lo cual supona una poblacin de 825 alumnos de 6 curso, segn la ratio
mxima establecida de 25 alumnos/profesor para los cursos de Primaria. Finalmente se
obtuvo una muestra de 639 cuestionarios cumplimentados por alumnos de 6 curso de
colegios de compensacin educativa de la provincia de Alicante, 217 alumnos de CAES y 422
de centros con Programas.
Resultados
De los 639 alumnos encuestados, alrededor del 50% son chicos y el 50% restante
chicas, de edades comprendidas entre los 10 y los 14 aos, siendo el grupo mayoritario, tanto
en CAES como en colegios con Programas, el grupo de edad de 11 aos (83,5%), edad que
corresponde al curso en el que estn matriculados, seguido por el de 12 aos (15,3%), las
978-84-695-8363-0
375
edades inferiores y superiores a stas tienen una escasa presencia (1,3%) tanto en CAES como
en colegios con Programas.
En relacin al lugar de nacimiento del alumnado estudiado podemos sealar que el
69,1% ha nacido en Espaa, y de ellos la mayora (60,8%) en Alicante o Comunidad
Valenciana; comparativamente hay ms alumnado espaol en CAES (74%) que en colegios
con Programas (67%), y se ha comprobado que la diferencia es estadsticamente significativa
(t=-2,04; p=0,04), en los CAES hay menos alumnos nacidos en el extranjero (M=1,26;
DT=0,44) que los que hay en los colegios con Programas (M=1,33; DT=0,7).
El 31% de alumnado extranjero se distribuye por lugar de nacimiento de forma muy
parecida tanto en CAES como en colegios con Programas, el mayor porcentaje de alumnos
dentro del grupo de extranjeros ha nacido en pases de Amrica del sur (14,9%), seguidos por
frica (5,5%), y los pases europeos de la Unin (4,5%) y del resto de Europa (4,5%). En los
centros estudiados hay una presencia muy pequea de alumnado originario del continente
asitico (0,9%) y de Amrica del norte (0,5%). La nica diferencia a sealar es la del
alumnado europeo que es ms frecuente en colegios con Programas (12%) que en CAES
(3%), mientras que el alumnado africano es ms destacable proporcionalmente en CAES (8%)
que en Programas (4%).
Con respecto a los aos de residencia de los alumnos en la Comunidad Valenciana, los
patrones de distribucin que observamos en CAES y en colegios con Programas son muy
similares, el grueso del alumnado reside en la Comunidad Valenciana ms de 10 aos (60,9%)
coincidiendo con el porcentaje de alumnos nacidos en la misma; el grupo de alumnos recin
llegados es el ms pequeo (2,5%) y en porcentajes similares tanto en CAES como en
Programas; el montante de los que llevan entre 1 y 5 aos en nuestro territorio es algo mayor
en colegios con Programas (21,8%) que en CAES (18,4%), y est igualado en el caso de los
alumnos que residen entre 6 y 10 aos en la Comunidad Valenciana.
Grfico de barras
Aos de residencia en
la C. Valenciana
250
Menos de 1 ao
De 1 a 5 aos
De 6 a 10 aos
Ms de 10 aos
Recuento
200
150
100
50
0
CAES
Programas
Actuacion
978-84-695-8363-0
376
Padres
Madre
Padre
Otros
Total
Total
75,5%
81,0%
79,1%
17,1%
3,2%
4,2%
100,0%
16,3%
,7%
1,9%
100,0%
16,6%
1,6%
2,7%
100,0%
978-84-695-8363-0
377
de hermanos de los alumnos de CAES (M=2,46; DT=1,53) que el que tienen los alumnos de
Programas (M=1,86; DT=1,36).
Grfico de barras
Nhermanos
200
Hijo nico
Un hermano
Dos hermanos
Tres hermanos
Cuatro hermanos
+ de cuatro hermanos
Recuento
150
100
50
0
CAES
Programas
Actuacin
N hermanos
Total
Hijo nico
Un hermano
Dos hermanos
Tres hermanos
Cuatro hermanos
+ de cuatro hermanos
Padres
79,3%
79,2%
85,0%
73,5%
78,9%
73,5%
79,0%
Vive con
Madre
17,2%
16,3%
11,6%
22,4%
18,4%
19,1%
16,7%
Padre
1,4%
2,0%
1,0%
4,4%
1,6%
Otros
3,4%
3,2%
1,4%
3,1%
2,6%
2,9%
2,7%
Total
100,0%
100,0%
100,0%
100,0%
100,0%
100,0%
100,0%
978-84-695-8363-0
378
los colegios con Programas, aunque los porcentajes son algo mayores en stos ltimos. Lo
contrario ocurre cuando nos situamos en posiciones ms altas en el lugar que ocupa en el
nmero de hermanos, as se observa que el porcentaje es comparativamente mayor en los
CAES (11,4% en quinto o posterior) que en los colegios con Programas (2,9%), lo que
coincide con los datos sobre nmero de hermanos descritos anteriormente. De hecho las
diferencias son estadsticamente significativas (t=4,38; p=0,00), los alumnos de los CAES
(M=2,32; DT=1,31) ocupan lugares ms atrs en el nmero de hermanos que los que ocupan
los alumnos de los colegios con Programas (M=1,87; DT=0,99), lo cual se corresponde con el
nmero de hermanos del que forman parte, como hemos visto anteriormente.
Es mayor el porcentaje de padres que no trabajan de los alumnos de los CAES (5,4%)
que en los colegios con Programas (1,8%). En los CAES el nivel profesional en el que se
ubican la mayora de los padres es en el de Obreros no cualificados (56,5%), mientras que
en los colegios con Programas es el nivel inmediatamente superior, Obreros cualificados
(52,5%); en el resto de la escala de niveles profesionales la relacin se invierte, y encontramos
en los CAES menos padres que realizan su trabajo en niveles profesionales superiores, siendo
casi inexistentes a nivel de Tcnicos, que los que encontramos en los colegios con Programas.
Se han encontrado diferencias estadsticamente significativas (t=-6,13; p=0,00) en el
nivel de cualificacin profesional que desempean los padres, en el sentido de que es ms
bajo en los padres de los alumnos de los CAES (M=1,42; DT=0,76) que en los de los colegios
con Programas (M=1,85; DT=0,85).
En comparacin con los padres hay un mayor nmero de madres que se sitan en
niveles profesionales inferiores, muchas de ellas, de hecho, no trabajan fuera del hogar
(34,2%). En los CAES el mayor porcentaje corresponde a las madres que no trabajan (41,7%),
en los colegios con Programas se sita en el nivel de Obreras no cualificadas (35,7%). A
partir de este nivel laboral los porcentajes van disminuyendo tanto en CAES como en
Programas, aunque comparativamente siempre se mantienen porcentajes mayores en los
niveles superiores en los colegios con Programas. Estas diferencias son estadsticamente
significativas (t=-3,40; p=0,00), las madres de los alumnos de los CAES (M=0,91; DT=0,99)
desempean profesiones de menor cualificacin que las madres de los alumnos de Programas
(M=1,21; DT=1,11).
Con respecto al nivel de estudios podemos decir que el perfil es muy similar en padres
y madres en todos los niveles de la escala, en ambos casos el mayor porcentaje se sita en el
nivel de estudios bsicos o primarios (35,9% y 36,7% respectivamente).
En los CAES el porcentaje de padres sin estudios (25,5%) es mayor que en los
colegios con Programas (14,2%), ocurre lo mismo en el caso de las madres sin estudios
(24,7% y 14,8% respectivamente). Tambin son algo mayores los porcentajes de padres y
madres de los CAES que han cursado estudios primarios que los de los colegios con
Programas.
Si se aprecia alguna diferencia entre CAES y Programas sta se sita en los niveles
superiores de estudios, invirtindose la relacin comentada anteriormente, de esta forma
observamos que se dan cifras ligeramente ms altas en los colegios con Programas en los
estudios medios (de secundaria) y superiores, tanto en padres como en madres, que las que se
dan en los CAES
978-84-695-8363-0
379
978-84-695-8363-0
380
La lengua que se habla de forma predominante en casa de los alumnos de sexto de los
centros estudiados es el castellano, siendo el porcentaje algo mayor en CAES que en colegios
con Programas, mientras que los porcentajes tanto de otras lenguas como de valenciano son
mayores en estos ltimos.
Referencias
Cea, M.A. (1998). Metodologa cuantitativa: estrategias y tcnicas de investigacin social.
Madrid: Sntesis.
INCE (2005). Evaluacin de la Educacin Primaria 2003. Madrid: Ministerio de Educacin y
Ciencia.
Orden de 4 de julio de 2001, de la Conselleria de Cultura y Educacin, que regula la atencin
al alumnado con necesidades de compensacin educativa. D.O.G.V., 17/07/2001.
978-84-695-8363-0
381
Resumen
Esta comunicacin presenta resultados parciales de una investigacin que pretende estudiar
las competencias de los futuros profesionales de la Educacin Social, centrndose en el
grado de desarrollo que dichas competencias tienen en la universidad y el dominio que de
ellas ha alcanzado el alumnado, desde su propia percepcin. Para ello se ha empleado el
Cuestionario de Evaluacin de Competencias de Grado (CECGRA), diseado ad hoc, que ha
sido cumplimentado por una muestra de 60 estudiantes de ltimo curso del Grado en
Educacin Social de la Universidad de Murcia. Los resultados muestran la necesidad de que
la Educacin Superior contribuya a un mayor desarrollo de competencias, favoreciendo
metodologas activas y un aprendizaje autnomo y autoregulado.
Descriptores: Competencias, Educacin superior, Educacin social.
Abstract
This paper shows partial results of a wider research, which pretends to analyze the
competences of the future professionals in Social Education, focusing on its development at
university and command developed by students. We used the Degree Competences Evaluation
Questionaire (CECGRA), designed ad hoc, and applied to 60 last years students of the
Degree in Social Education at University of Murcia. Results show the necessity of a wider
development of certain competences at Higher Education, employing new methodologies and
focusing on students learning, emphasizing self-regulated learning.
Keywords: Competences, Higher education, Social education.
Introduccin
Vivimos en una sociedad compleja y diversa que necesita alcanzar la madurez social,
promover las relaciones humanas y preparar a las personas a vivir en una sociedad
especialmente diversa. Esta triple premisa coincide con las grandes finalidades de la
Educacin Social, pues sta, desde sus distintos enfoques y perspectivas, busca el cambio o
transformacin social, facilita la adaptacin, se aproxima a las necesidades humano-sociales,
contextualiza su accin en contextos no formales (sociales) y formales (educativos), est en
978-84-695-8363-0
382
contacto continuo con la realidad, sus destinatarios son agentes activos de su propios procesos
de cambio y requiere de profesionales cualificados y competentes, que tradicionalmente van a
desarrollar su labor en tres mbitos de intervencin (ANECA, 2004): la educacin social
especializada, trabajando con colectivos en riesgo de exclusin social; la animacin
sociocultural, centrndose en el desarrollo comunitario, y la educacin de adultos,
favoreciendo el acceso a la educacin a lo largo de toda la vida a todas las persona adultas.
Adems de estos tres grandes mbitos de intervencin se sealan tambin otros campos en los
que la Educacin Social va a tener un importante desarrollo, tales como la institucin escolar
(Ortega, 2005; Parcerisa, 2008), o el trabajo con personas mayores (Gonzlez Alemn, 2010).
Esta labor tan amplia y diversa en campos y sujetos de intervencin precisa y requiere
formar a los estudiantes de este perfil en relacin a una serie de competencias o
conocimientos, habilidades y estrategias, as como actitudes y criterios ticos, puesto que,
como afirma Caride (2008, p. 109), desarrollarn su labor profesional en la sociedad, all
donde los problemas y dificultades que aquella presenta obligan a hacer conciliable la
competencia tcnica con las obligaciones ticas, el saber hacer con el saber ser.Del mismo
modo que determinadas competencias van a poder ser transferibles de unas profesiones a
otras (Weiner, 2004), los profesionales de la educacin social van a tener que desarrollar
competencias que les permitan afrontar las exigencias que se les plantean desde sus diferentes
mbitos de intervencin.
De esta manera, desde este trabajo nos proponemos como objetivo de investigacin
conocer y comparar el desarrollo y dominio de las competencias (bsicas, transversales,
generales del ttulo y especficas del ttulo) que conforman el Grado en Educacin Social en la
Universidad de Murcia, a travs de la valoracin de las mismas por el alumnado de ltimo
curso.
Mtodo
Enfoque metodolgico y diseo de investigacin
Este trabajo de investigacin tiene un enfoque cuantitativo, presentando un diseo
descriptivo, puesto que pretende especificar las percepciones de los estudiantes acerca del
desarrollo y dominio de una serie de competencias; no experimental, puesto que no se
introducen modificaciones en las variables de estudio, y transversal, puesto que la
informacin se recoge en un nico momento.
Participantes
En esta investigacin han participado 60 estudiantes de ltimo curso del ttulo de
Grado en Educacin Social, siendo un 15% de los mismos hombres y un 85% mujeres,
porcentaje representativo de la presencia de hombres y mujeres en dichos estudios. La edad de
los participantes se encuentra entre los 20 y los 36 aos, siendo la edad media de 22.49 aos.
El hecho de contar nicamente con una muestra de participantes de ltimo curso asegura que
stos tienen una suficiente experiencia universitaria.
Instrumento
Para la recogida de informacin se ha diseado ad hoc un cuestionario que hemos
denominado Cuestionario de Evaluacin de Competencias de Grado (CECGRA), en el que se
978-84-695-8363-0
383
978-84-695-8363-0
384
ambos casos el dominio de los estudiantes sobre las mismas que el desarrollo que stas han
tenido a lo largo de los estudios universitarios.
Tabla 1
Competencias bsicas. Desarrollo - Dominio. Prueba de Wilcoxon
Z
Sig.
-1.551
.121
CBA2. Defender con argumentos, as como resolver problemas dentro del rea de
estudio.
-.716
.474
CBA3. Reunir e interpretar datos dentro del rea de estudio para emitir juicios.
-1.724
.085
-2.064
.039
-3.638
.000
978-84-695-8363-0
385
Tabla 2
Competencias transversales. Desarrollo - Dominio. Prueba de Wilcoxon
Z
-2.49
Sig.
0.01
-3.67
0.00
-2.23
0.03
-3.99
0.00
CT5. Proyectar las competencias adquiridas para promover una sociedad libre, justa,
igual y plural.
-2.44
0.01
CT6. Trabajar en equipo y relacionarse con personas del mismo o distinto mbito
profesional.
-0.16
0.88
-0.82
0.41
978-84-695-8363-0
386
que, a lo largo de los cuatro cursos del Grado, a los alumnos se les ha exigido desde diferentes
asignaturas el diseo y presentacin de diferentes proyectos de intervencin social. Podemos
inferir, por tanto, que los estudiantes han valorado que los proyectos que se les solicitaban no
tenan un carcter innovador y creativo.
Tabla 3
Competencias generales de la titulacin. Desarrollo - Dominio. Prueba de Wilcoxon
Z
Sig.
CGT1. Comprender los contextos y fundamentos tericos de la educacin social.
-1.053
0.29
-0.261
0.79
-2.593
0.01
-0.799
0.42
978-84-695-8363-0
387
Tabla 4
Competencias especficas de la titulacin. Desarrollo - Dominio. Prueba de Wilcoxon
Z
-1.499
Sig.
0.13
-1.671
0.09
-0.661
0.50
-1.345
0.17
-0.974
0.33
-2.707
0.00
-0.72
0.47
-1.169
0.24
-3.078
0.00
-2.272
0.02
Discusin
Los resultados iniciales nos muestran una escasa diferencia entre el desarrollo y
dominio alcanzado por el alumnado en cuanto a las competencias bsicas, generales del ttulo
y especficas del ttulo, todo lo contrario a lo que ocurre con las competencias transversales.
Cuando se dan estas diferencias, resulta paradjico comprobar cmo el alumnado opina que
es mayor su dominio o capacidad a la hora de llevarlas a cabo que el desarrollo que se ha
propiciado de dichas competencias a lo largo de las distintas asignaturas que componen el
plan de estudio, lo que nos lleva a preguntarnos si los estudiantes complementan su formacin
universitaria en ciertos aspectos que consideran bsicos debido a que sta no consigue
satisfacer sus necesidades.
Los datos muestran que las competencias con un mayor nivel de dominio por parte de
los estudiantes son la CBA5, relacionada con las habilidades para el trabajo autnomo; la
CT6, concerniente al trabajo en equipo y la relacin con personas del mismo o diferente
mbito profesional; la CGT2, referida al anlisis de la realidad social para la elaboracin de
proyectos de intervencin; la CET3, que se corresponde con el diseo de proyectos y
estrategias de intervencin en el mbito de la educacin social, y, por ltimo, la CET9a,
relativa a la dimensin social y tica de la educacin social. Por otro lado, en cuanto a las
competencias con un menor dominio por parte de los estudiantes, destaca la CT2, una
978-84-695-8363-0
388
978-84-695-8363-0
389
978-84-695-8363-0
390
Resumen
Esta comunicacin recoge los resultados de una investigacin que pretende conocer la
percepcin de los estudiantes de la Facultad de Educacin de la Universidad de Murcia en
relacin al desarrollo, dominio y relevancia de las competencias transversales de su ttulo y
las diferencias existentes en funcin de la titulacin. Para ello se ha diseado un cuestionario
ad hoc aplicado a 629 estudiantes de ltimo curso. Los resultados muestran un alto grado de
importancia en las competencias transversales, con independencia del Grado que cursan; sin
embargo, se encuentran diferencias significativas en el desarrollo y dominio en funcin de la
titulacin, siendo stas ltimas categoras aquellas valoradas con puntuaciones ms bajas.
De esta forma, se pone de manifiesto la necesidad de aunar esfuerzos para equilibrar las tres
dimensiones y mejorar la formacin de nuestros futuros profesionales en un mundo
cambiante y global.
Descriptores: Convergencia europea, Educacin superior, Competencias transversales,
Evaluacin.
Abstract
This paper shows the results of a research, which aims to know the perceptions of students of
the Faculty of Education at University of Murcia in relation to the development, domain and
relevance of transversal competences of his degree and differences depending on the degree.
For this reason, we have designed an ad hoc questionnaire applied to 629 students last year.
The results show a high degree of importance in transversal competences, regardless of the
degree that present, however, there are significant differences in the development and domain
depending on degree, these latter dimensions are those with lower scores valued. In this way,
it becomes expressed the need for concerted efforts to balance the three dimensions and
improve the training of our future professionals in a changing and globally world.
Keywords: Convergence, Higher education, Transversal competences, evaluation.
978-84-695-8363-0
391
Introduccin
Con la implantacin del Espacio Europeo de Educacin Superior, el mbito
universitario se ha visto inmerso en un proceso de cambio que ha afectado a la manera de
concebir la enseanza para adaptarse a los nuevos desafos que plantea la sociedad.
Hoy ms que nunca, en el contexto de cambio y recesin econmica en el que
vivimos, la universidad necesita estar en continuo dilogo con las necesidades sociales y
laborales, en aras de mejorar la calidad de la formacin y por ende, la construccin de
profesionales competentes. Segn Weinert (2004), un profesional competente no es solo aquel
capaz de desenvolverse en el mundo laboral, sino aquel que tiene adems las competencias
que le capacitan para vivir en sociedad. Es por ello que pensamos que la misin de la
Educacin Superior debe reorientarse hacia la consecucin de una formacin integral del
alumnado (Lpez Ruiz, 2011). Este propsito comporta la necesidad de un cambio en el
modelo de enseanza universitario, desde uno basado en los conocimientos hacia otro
focalizado en competencias, en concreto, en la combinacin, integracin y movilizacin de las
mismas, con el fin de facilitar la adaptacin al actual tiempo cambiante.
En este sentido, una formacin de calidad y contextualizada solo exige formar en
conocimientos y destrezas profesionales (competencias especficas), sino que debe considerar
como prioritario el desarrollo de aquellas competencias que permitan a los egresados hacer
frente a la creciente complejidad y diversidad del entorno social y econmico actual, as como
adaptarse a la continua reformulacin de las demandas socio-laborales. Por esta razn, se
convierte en prioritario el desarrollo de las competencias transversales en el mbito
universitario, entendiendo a estas competencias, como afirma Weine (2004) y Gonzlez y
Wagennar(2003), independientes de un mbito profesional concreto y transferibles de unas
profesiones a otras con un uso y efectividad equiparable en distintos mbitos socio-laborales.
Sin embargo, hasta fechas recientes se ha cuestionado si el desarrollo de estas competencias
debiera ser objeto de la formacin universitaria (Martnez Lpez, 2008).
La pertinencia de esta temtica justifica la gran diversidad de investigaciones que se
han centrado en la formacin en competencias transversales de los egresados (Allen y van der
Velden, 2003; ANECA, 2004, 2009; Informe CAR y Universia 2007). Por ello, y
aprovechando las primeras promociones de graduados, pensamos que es el momento de
detenernos a pensar y realizar las primeras valoraciones sobre el perfil de competencias de los
egresados, desde su propia percepcin o creencia.
De esta forma, el presente estudio se centra en conocer la percepcin de los
estudiantes de la Facultad de Educacin de la Universidad de Murcia en relacin a las
competencias transversales comunes a todos sus ttulos de Grado, en cuanto a tres
dimensiones: el desarrollo o incidencia que se hace a lo largo de la carrera en dichas
competencias, el dominio o grado de adquisicin de las mismas y la relevancia o importancia
que le confieren los estudiantes para su futuro profesional. As, el propsito de este estudio es
obtener una visin general de la formacin en competencias transversales de los futuros
profesionales del mbito educativo para poder contribuir a la mejora de la calidad de la
educacin universitaria.
Por consiguiente, los objetivos que nos planteamos en esta investigacin se concretan
en estudiar las diferencias entre el desarrollo, el dominio y la relevancia de las competencias
transversales desde la percepcin del estudiante de la Facultad de Educacin de la
978-84-695-8363-0
392
978-84-695-8363-0
393
Procedimiento
El proceso de realizacin del presente estudio pasa por diferentes momentos. En
primer lugar, se realiz una bsqueda bibliogrfica y se concretaron los objetivos del mismo.
Seguidamente se dise el instrumento de recogida de informacin y se realiz un pilotaje del
cuestionario para garantizar su validez, toda la informacin obtenida fue valorada mediante la
metodologa de juicio de expertos (Hodder, 2000). Ms tarde, para la recogida de
informacin, se contact con los tutores de cada grupo-clase, con la finalidad de administrar
el cuestionario en la hora reservada a tutora grupal. Finalmente, se analizaron los datos con el
programa estadstico SPSS v19 y se realiz la posterior interpretacin de los resultados.
Resultados
A continuacin se presentan los resultados de la investigacin a partir de los objetivos
propuestos.
Objetivo 1: Estudiarlas diferencias entre el desarrollo, el dominio y la relevancia de las
competencias transversales desde la percepcin delos estudiantes.
Para dar respuesta a este objetivo se recurre a la estadstica descriptiva, a travs del
clculo de la media de la respuesta de los participantes. De forma general, los estudiantes de
la Facultad de Educacin de la Universidad de Murcia manifiestan un desarrollo medio
( =3) de las competencias transversales a lo largo de su formacin. Sin embargo, aquella
competencia que ha obtenido una puntuacin ms alta corresponde a aquella relacionada con
el trabajo en equipo (CT6) con una media de 4.35. Por el contrario, la competencia menos
valorada es coincidente en todas los grados ( =1.88) y se trata de la CT2 que hace referencia
a comprender y expresarse en un idioma extranjero.
En relacin al dominio, cabe destacar que las puntuaciones son ligeramente ms
elevadas que las otorgadas al desarrollo de dichas competencias. Como se aprecia en el
Grfico 1, la mayora son valoradas entre 3 y 4 (regular y bastante). De nuevo, aquella
competencia que destaca con la puntuacin ms alta coincide con la relacionada con el trabajo
en equipo (CT6), al igual que aquella que ha obtenido una puntuacin ms baja con
desenvolverse en una lengua extranjera (CT2).
Una situacin diferente se encuentra tras analizar la relevancia. Los alumnos
consideran todas estas competencias bastante importantes, con valores comprendidos entre 4
y 5 (bastante y mucho). Adems, aquella competencia que consideran la ms relevante
( =4.58) hace referencia a la capacidad para expresarse correctamente (CT1), seguida muy de
cerca por la CT6 ( =4.35) y la CT2 ( =4.40). Resulta curioso como esta ltima competencia
ha sido la menos desarrollada a lo largo de la formacin de los participantes y adems la que
menos dominan, segn la percepcin del alumnado, pero, sin embargo, es la tercera
competencia mejor valorada en esta dimensin, considerndola as fundamental para su futuro
profesional.
978-84-695-8363-0
394
Grafico 1. Medias del grado de desarrollo, dominio y relevancia de las competencias transversales
CT1
621
428,139
2
,000
CT2
CT3
CT4
625
856,849
2
,000
625
382,936
2
,000
624
490,704
2
,000
CT5
626
511,389
2
,000
CT6
CT7
627
51,177
2
,000
623
522,243
2
,000
Grafico 2. Medias del grado de desarrollo de las competencias transversales por titulaciones
978-84-695-8363-0
395
Sin embargo, para detectar las diferencias significativas (p<.05) entre grados se ha
recurrido a la estadstica inferencial, a travs de la prueba H de Kruskal-Wallis, cuyos
resultados informan de la existencia de diferencias en las competencias CT1, CT2, CT3, CT4
y CT5.
Tabla 4
Diferencias significativas en el desarrollo en funcin de las titulaciones (Prueba de Kruskal-Wallis)
Chi-cuadrado
gl
Sig.Asint(p)
CT1
13,198
3
,004
CT2
104,190
3
,000
CT3
33,463
3
,000
CT4
40,311
3
,000
CT5
18,953
3
,000
CT6
2,066
3
,559
CT7
,620
3
,892
Grafico 3. Medias del grado de dominio de las competencias transversales por titulaciones
978-84-695-8363-0
396
Tabla 5
Diferencias significativas en el dominio en funcin de las titulaciones (Prueba de Kruskal-Wallis)
Chi-cuadrado
gl
Sig. Asint.(p)
CT1
14,70
3
3
,002
CT2
60,623
CT3
16,749
CT4
13,568
CT5
6,525
CT6
2,775
CT7
6,000
3
,000
3
,001
3
,004
3
,089
3
,428
3
,112
Grafico 4. Medias del grado de relevancia otorgado por el alumnado a las competencias
transversales segn su titulacin
A la vista de los resultados obtenidos, las respuestas de los alumnos son semejantes en
todas las titulaciones, con valores comprendidos entre 4 y 5, que indican que todos los
alumnos, independientemente de su titulacin, consideran las competencias bastante
importantes para su futuro profesional. Sin embargo, existen diferencias significativas
(p<.05), como se aprecia en la Tabla 6, en las competencias CT2, CT3, CT4, CT6 y CT7.
978-84-695-8363-0
397
Tabla 6
Diferencias significativas en la relevancia en funcin de la titulacin (Prueba de Kruskal-Wallis)
Chi-cuadrado
gl
Sig.asint.(p)
CT1
3,775
3
,287
CT2
13,390
3
,004
CT3
13,741
3
,003
CT4
10,676
3
,014
CT5
6,745
3
,080
CT6
23,911
3
,000
CT7
31,875
3
,000
978-84-695-8363-0
398
hacer frente a un mundo socio-laboral complejo y cambiante, que precisa cada vez ms de
profesionales flexibles capaces de adaptarse a situaciones diversas.
Si bien, en general, no existen grandes diferencias entre las titulaciones de la Facultad
de Educacin, aquellas ms significativas se encuentran entre los Grados de Pedagoga y
Educacin Primaria, donde los estudiantes del primero opinan de una manera ms favorable
tanto en el desarrollo como en el dominio de la mayora de las competencias. En este sentido,
podemos concluir con la necesidad de buscar cmo equilibrar el desarrollo, el dominio y la
relevancia dada a las competencias transversales de los Grados analizados y as conseguir
una coherencia entre lo que se hace, lo que adquieren y desarrollan los estudiantes y lo que es
importante que conozcan como futuros profesionales del mbito educativo, cuyas funciones
en su contexto laboral tendrn grandes implicaciones en la sociedad.
Referencias
Allen, J., & van der Velden, R. (Eds.) (2003). The flexible professional in the knowledge
society: General results of the REFLEX Project. Pases Bajos: Maastricht University.
ANECA (2004). Encuesta de insercin laboral. Madrid: ANECA.
ANECA (2009). Los procesos de insercin laboral de los titulados universitarios en Espaa.
Factores de facilitacin y obstaculizacin. Madrid: ANECA.
CAR & Universia (2007). Las competencias profesionales en los titulados. Contraste y
dilogo Universidad-Empresa. Disponible en
http://www.unizar.es/ice/images/stories/calidad/ResumenEjecutivoEstudioCompetencias.
pdf
Gonzlez, J., & Wagenaar, R. (2003). Tuning educational structures in Europe (Informe
Final - Fase 1). Bilbao: Universidad de Deusto.
Hodder, I. (2000). The interpretation of documents and material culture. En N. K. Denzin y S.
Lincoln (Eds.), Handbook of qualitative research (pp. 703-717). Londres: Sage
Publications.
Lpez Ruz, J. I. (2011.) Un giro copernicano en la enseanza universitaria: formacin por
competencias. Revista de Educacin, 356, 279-301.
Martnez Lpez, J. (2008). La opinin de los profesores universitarios. En AA.VV.,
Competencias genricas y transversales de los titulados universitarios (pp. 28-33).
Zaragoza: Instituto de Ciencias de la Educacin de la Universidad de Zaragoza.
Weinert, F.E. (2004). Concepto de competencia: una aclaracin conceptual. En D. S. Rychen
y L. H. Salganik (Eds.), Definir y seleccionar las competencias fundamentales para la
vida (pp. 94-127). Mxico: Fondo de Cultura Econmica.
978-84-695-8363-0
399
Resumen
Es comn encontrar que en los centros escolares se estn implementando diversos programas
educativos, en los cuales colaboran los docentes que participan en el programa internacional
Ecoescuelas. Sin embargo, el tiempo y el esfuerzo que conllevan al docente involucrarse en el
adecuado desarrollo de un gran nmero de actividades, requiere de una estrategia educativa:
la coordinacin de contenidos intersectoriales. Es por ello, que se plante como objetivo
identificar contenidos intersectoriales que pueden ser abordados de manera coordinada en
los diversos programas educativos a partir de las actividades realizadas por los docentes
participantes en el programa Red Andaluza de Ecoescuelas. La recogida de informacin se
realiz a travs de entrevistas semiestructuradas que se realizaron a 27 profesionales
educativos de toda Andaluca. Los resultados indican que entre los contenidos
intersectoriales se puede considerar aquellos relacionados con la convivencia, la
coeducacin, la educacin en valores, la cultura, la solidaridad o los hbitos ecosaludables.
Descriptores: Educacin Ambiental, ecoescuelas, docentes, escuela, diversidad.
Abstract
It is common to find that school centers are implementing several educational programs in
which teachers collaborate, who participating in the international Eco-Schools program.
However, time and effort involved by the teachers in the proper development of a large
number of activities required of an educational strategy: coordination intersectoral contents.
So, the research goal was to identify cross content that can be addressed in a coordinated
way in the several educational programs from the activities of the teachers participating in
Eco-Schools Andalusian Network Program. The information collection was conducted
through semi-structured interviews at 27 educational professionals in Andalusia. The results
obtained, by the content analysis, indicate that among intersectoral content can consider
those related to coexistence, co-education, values education, culture, solidarity or ecohealthy
habits.
Keywords: Environmental Education, eco-schools, teachers, school, diversity.
978-84-695-8363-0
400
Introduccin
Las administraciones pblicas educativas ofrecen a los centros escolares multitud de
programas educativos para que puedan ser implementados. En el caso del contexto andaluz,
los centros pueden solicitar la participacin en programas como Coeducacin, Cultura
Andaluza, Aldea21, Hbitos de Vida Saludable 22, Cultura Emprendedora, Escuela,
Espacio de Paz, etc. Ante tal variedad de intervenciones educativas y la implicacin
educativa del profesorado, muchos centros solicitan ms de uno de ellos. Sin embargo, dicha
demanda satura la labor educativa de los docentes que participan en los programas
implementados, cuya mayor repercusin percibida por los mismos es la carencia de tiempo
para dedicar a disear e implementar las iniciativas y actuaciones.
As lo manifestaron los docentes que participaron en un estudio ms amplio, al que
pertenece la investigacin que se presenta, sobre los coordinadores del programa internacional
Ecoescuelas (Estrada, 2012). La mayora de este colectivo de profesorado indic que participa
en ms de un programa, adems de ser coordinador de Ecoescuelas. Ante tal situacin, la
prctica educativa se vuelve ms compleja.
En otro sentido, entienden que la educacin es integral y que es una nica realidad la
que vivencian los educandos. Por ello, manifiestan que existe una serie de contenidos
comunes en diversos programas, ya sean de la misma o diferente temtica educativa, los
cuales pueden servir como nexo para desarrollar actividades e iniciativas coordinadas. Incluso
existen centros escolares con una amplia experiencia en la coordinacin de programas, como
es el caso del CEIP Virgen del Rosario (Totaln, Mlaga), que llevan muchos aos
desarrollando el proyecto Un hombre, una mujer. Dicho proyecto desarrolla buenas
prcticas educativas relacionadas con la coeducacin a travs de los programas de
Ecoescuelas, Escuela, Espacio de Paz y Coeducacin (Rebollo et al., 2012).
Como indica Tourin (2010), la educacin tiene un sentido social de la diversidad y
la identidad, ya que debe desarrollar personas que se valgan por y para s mismas, as como el
sentido de la relacin con el otro. Adems, la escuela ha de enfocar la diversidad desde el
respeto, la solidaridad, y valores sociales como la justicia social (Bennett, 1999). En este
sentido, la Educacin Ambiental se fundamenta en el respeto y la convivencia con el entorno,
considerando como tal los elementos biticos como abiticos, entre los cuales se encuentran
las personas. La intervencin educativa ha de fomentar el respeto por la diferencia de todos
los seres que se encuentran en el Planeta (Bayot, Rincn y Hernndez, 2002).
Desde los documentos internacionales que sirven de referencia en Educacin
Ambiental (EA), para desarrollar la convivencia, se pretende como ltimo fin que la
poblacin mundial adquiera conciencia del ambiente, y competencias que les permita
participar activamente sobre los problemas que existen en su entorno y/o prevenir los que
pudiesen aparecer en el futuro (UNESCO, 1977, 1978; UNESCO y PNUMA, 1987).
El objetivo para la presente investigacin es identificar contenidos intersectoriales que
pueden ser abordados de manera coordinada en los diversos programas educativos a partir de
las actividades realizadas por los docentes participantes en el programa Red Andaluza de
Ecoescuelas.
21
22
978-84-695-8363-0
401
Mtodo
Durante el curso lectivo 2010/2011 participaron 127 centros escolares en el programa
Ecoescuelas, sobre los que se realiz un muestreo por cuotas, utilizando los criterios de
representatividad de las ocho provincias andaluzas y de nivel educativo del centro (infantil y
primaria, y secundaria). A los 16 centros seleccionados se les aadieron posteriormente las
dos Secretaras Educativas que asesoran y dinamizan a los coordinadores, as como tres
centros escolares ms por su experiencia en Ecoescuelas, resultando un total de 27
profesionales entrevistados.
Se sigui un diseo de encuesta, utilizando como instrumento la entrevista
semiestructurada, la cual se organiz en tres dimensiones: 1) temticas que se abordan en el
centro escolar con el programa Ecoescuelas, 2) actividades que se realizan en el centro con el
programa Ecoescuelas, y 3) participantes en el programa Ecoescuelas. Se acudi a los centros
escolares para realizar la entrevista a los correspondientes coordinadores del programa
Ecoescuelas, previamente habiendo informado a la coordinacin del programa a nivel de la
Administracin Andaluza.
Se realiz un anlisis de contenido de las entrevistas transcritas, haciendo uso del
programa Atlas.ti versin 7 para la categorizacin de la informacin (sistema de categoras
emergentes, consultar Tabla 4).
Tabla 4
Sistema de categoras de los contenidos intersectoriales sobre diversidad que pueden ser abordados
por diversos programas educativos
Cdigo
Conv
Categoras
Convivencia
EdVal
Educacin
valores
en
Cul
Cultura
Sol
Solidaridad
HabEcos
Hbitos
ecosaludables
Coed
Coeducacin
Resultados
A continuacin se exponen algunos programas en los cuales participan los docentes de
la Red Andaluza Ecoescuelas (RAE), seguidos de los contenidos intersectoriales que abordan
los docentes en el programa RAE y que pueden ser abordados coordinadamente con otros
programas educativos.
978-84-695-8363-0
402
Convivencia
El desarrollo de conductas proambientales en la comunidad educativa implica que las
personas han de adquirir actitudes y comportamientos de respeto hacia el ambiente que les
rodea. Se pretende lograr una adecuada convivencia de las personas con su entorno, ya sea
este fsico-qumico o los seres vivos (elementos abiticos y biticos). Es por ello, que la
convivencia es un contenido que se encuentra inmerso en la EA fundamentado en el respeto
hacia lo que nos rodea: animales, plantas y personas. Se entiende que la participacin de la
sociedad tiene que estar relacionada con las normas de convivencia y el altruismo hacia los
dems, y que la convivencia se puede tratar en mltiples circunstancias, puesto que en
cualquier situacin se ha de convivir con lo/s dems (consultar Tabla 6).
Tabla 6
Contenidos intersectoriales: convivencia, educacin en valores, cultura, solidaridad, hbitos
saludables y coeducacin
Conv E2P247L8-9. () cmo interactas con tu medio fsico y natural? Pues conservndolo, no? Y
haciendo, teniendo, no s, hbitos de vida respetuosa con l.
EdVal E18P232L1-3. () si los nios van a trabajar, que viven en frica, que trabajan desde pequeos, que
tienen que ir a un pozo, que no s qu; ah trabajas valores, trabajas agua, trabaja electricidad porque all no hay
luz como nosotros la malgastamos, como no somos conscientes de lo, de la buena vida que llevamos y ellos no,
comparamos.
Cul E20P233L3-4. (...) el flamenco en donde las letras que hum que se utilizan, es un estudio de las letras del
flamenco en relacin a el medio, el medio natural. Y el medio medio ambiente ().
978-84-695-8363-0
403
Sol E1P50L1-5. Por ejemplo, nosotros nos dedicamos, hacemos dos o tres campaas para reciclar ropa. (), se
lo mandamos a Critas o se lo mandamos a X () y hacemos un mercadillo solidario. (). Se monta un
mercado en el pueblo el da del mercadillo y se vende juguetes viejos, ropa,..., lo que sea. Ese dinero, pues eso,
se manda a una ONG.
HabSal E5P195L13. () el ruido. Que en otro sentido, es la relacin interpersonal ().
Coed E3P26L3-7. () aqu todo es Ecoescuelas, () hacemos juegos que son no sexistas. () juegos que
ellos han aprendido en educacin fsica, cuyos materiales lo han elaborado con materiales que se iban a ir a
parar a la basura (), le dan utilidad, aprenden a jugar, nios y nias, siempre son equipos mixtos, equipos
equilibrados ().
Educacin en valores
Los docentes opinan que la educacin en valores es fundamental en EA para que las
personas se conciencien y adquieran buenas prcticas ambientales sobre cualquier aspecto: el
agua, los residuos, la energa, la biodiversidad, la contaminacin, el entorno rural, el entorno
urbano, las personas, etc. Si se analiza desde el punto de vista de la ecologa, se entiende que
esta comienza por uno mismo y abarca todo lo relacionado con los valores: respeto,
solidaridad, de convivencia, de los intereses colectivos y no individuales, etc. (ver Tabla 6).
Asimismo, como compromiso ambiental, se han de tratar no slo en el centro, tambin con la
familia para que el alumnado lo aplique en sus casas y as hacer una trasferencia de los
aprendizajes a contextos externos al escolar
Cultura
La cultura es el conjunto de saberes, creencias y conductas propias de un grupo social,
que en el caso ambiental, se relacionan principalmente de dos maneras. La primera de ellas
hace referencia a aquellos pequeos gestos ambientales y que tradicionalmente se haca uso
de ellos (cultura ambiental enseando buenas prcticas ambientales, informando sobre las
causas de los problemas ambientales que pueden generar y concienciando). Por ejemplo, el
uso de talegas, la fabricacin de jabn a partir del aceite, cultivos ecolgicos, etc. La segunda,
con los que son propios de la cultura andaluza (como son el flamenco o la Semana Santa; ver
Tabla 6). Es muy comn participar en la Semana Cultural que se celebra anualmente en los
centros escolares, para la realizacin de exposiciones relacionadas con el ambiente, donde
suele haber un da especfico para Ecoescuelas.
Solidaridad
En ocasiones se invita a ONGs para que realicen alguna actividad que donde se
manifieste la transmisin de valores solidarios, y en otras, para participar en el mercadillo
solidario que se realiza en el centro educativo o para donarles los beneficios econmicos
recaudados en el mercadillo a partir de la venta de objetos usados (reutilizacin). De la misma
manera, el comercio justo conciencia e implica las personas en el consumo responsable, al
realizar compras de productos fabricados en sistemas que respetan los derechos de los
trabajadores (por ejemplo, habitundose a mirar la etiqueta), o que existen pocos
intermediarios entre la venta de la materia prima hasta la venta final del producto elaborado.
978-84-695-8363-0
404
Hbitos ecosaludables
Se desarrollan hbitos como la ingesta de alimentacin sana y equilibrada para reducir
los riesgos de salud (consumo de frutas, verduras o bocadillos en sustitucin de la bollera
industrial o las golosinas), complementado con hbitos saludables de movilidad para reducir
el sedentarismo (andar o el uso de bicicletas como medio de transporte). Al mismo tiempo,
los hbitos de movilidad ayudan a reducir la emisin de contaminantes en el aire, que nos
perjudica al respirar (uso de medios de transporte colectivos). En la reduccin de
contaminantes del aire, tambin se aborda la reduccin de ruido (emisin de contaminantes
acsticos para la mejora de calidad de vida), as como la prevencin y reduccin del
tabaquismo.
Coeducacin
Los docentes reconocen que es complicada la coeducacin, especialmente cuando los
aprendizajes adquiridos en el entorno familiar no son propicios para la igualdad de gnero. La
coeducacin tambin es respeto a las personas independientemente de su sexo, y las
relaciones entre las personas han de ser adecuadas. Es por ello, que se incluye en actividades
que se realizan dentro de Ecoescuelas (ver Tabla 6). Hay iniciativas en las cuales hacen
partcipes a otros agentes para formar en coeducacin tanto dentro como fuera del centro. As,
por ejemplo, organizan mercadillos solidarios en los cuales invitan a alguna asociacin o
entidad para que participe desde un stand.
Discusin
Las tendencias educativas parecen indicar que las actuaciones entre los diversos
programas educativos que se implementan en los centros escolares, se estn coordinando cada
vez con mayor frecuencia para gestionar mejor recursos imprescindibles para los docentes,
especialmente el tiempo. Es cierto que todava se dista de un trabajo interdisciplinario en el
cul se coordinen los programas para disear actividades ms complejas que aborden distintos
aspectos educativos, pero ya se est comenzando a dar pasos para lograrlo. Ello se debe
tambin a que la educacin en los centros escolares se entiende desde una perspectiva
integral, cuya realidad se debe mostrar a los educandos como un todo, como una nica
realidad en la cual se dan simultneamente diversos aspectos de la misma.
Es por ello, que los docentes no comprenden la educacin como algo que contienen
diversos contenidos sin relacin entre ellos. Por el contrario, procuran cada vez ms introducir
nuevos elementos en su currculum y en su accin docente para abordar diversos contenidos
relacionados con los valores y las normas. En el caso de la atencin a la diversidad, el
profesorado que participa en el programa Ecoescuelas entiende que desde la EA se debe
abordar contenidos como la convivencia, la educacin en valores, la cultura, la solidaridad,
los hbitos ecosaludables y la coeducacin.
Dichos contenidos se pueden abordar al mismo tiempo con otros programas
educativos ofertados por la Junta de Andaluca u ofertados por otros organismos o entidades,
ya sean propios de la temtica educativa ambiental (programa Aldea) como de otras.
As, si desde la EA se tratan las diferencias entre los pases norte-sur, cuyos problemas
socioeconmicos y ambientales existentes en los llamados pases del sur se debe en parte a
aspectos derivados del deterioro ambiental causados en diversas partes del mundo a causa de
978-84-695-8363-0
405
los hbitos de consumo y estilo de vida de los pases ms desarrollados, se sensibiliza a los
educandos a travs de la solidaridad, la convivencia, los valores, cambio en los hbitos de
movilidad y de consumo.
Sin embargo, para poder atender en mayor grado dichos contenidos, hay un nmero de
actividades e iniciativas que se pueden planificar desde el programa Ecoescuelas (o cualquier
otro de EA) de manera conjunta con otros programas, diseando as, actividades comunes,
donde la EA comparte contenidos.
As, por ejemplo, la convivencia y la educacin en valores se puede abordar en todos
los programas, puesto que para realizar cualquier actividad es necesaria que surjan buenas
relaciones entre las personas, pero tambin con el entorno en el que se encuentra. Para ello, se
precisa el desarrollo de actitudes y comportamiento de respeto, el conocimiento de normas de
convivencia, la adquisicin de habilidades para relacionarse con su entorno, el aprendizaje de
resolucin de problemas y el desarrollo de buenas prcticas ambientales.
En el caso de los hbitos ecosaludables, los aspectos relacionados con la alimentacin
saludable (dieta sana y equilibrada: consumo de fruta y verduras o la reduccin de bollera) se
pueden coordinar con programas como Alimentacin saludable o Plan de consumo de
fruta. Los aspectos relacionados con los hbitos saludables de movilidad (estilos de vida no
sedentarios, uso de transporte pblico o de medios de transporte como es la bicicleta,
compartir vehculo al desplazarse) se pueden coordinar con programas como Deporte
Escolar o Mira (educacin vial). O los aspectos relacionados con la prevencin y
reduccin del tabaquismo con A no fumar, me apunto.
No obstante, se necesita ahondar con mayor profundidad en los contenidos
intersectoriales del programa Ecoescuelas con otros programas educativos, realizar una
clasificacin de las actividades que se pueden desarrollar en las mismas, y determinar qu
aspectos de dichos contenidos son de inters para otros programas educativos.
Referencias
Bayot, A., Rincn, B. Del y Hernndez, F. (2002). Orientacin y atencin a la diversidad:
descripcin de programas y acciones en algunos grupos emergentes. RELIEVE, 8(1),
66-87.
Bennett, C. (1999). Comprehensive Multicultural Education: Theory and Practice. 4 Ed.
Boston: Allyn and Bacon.
Estrada, L. I. (2012). Concepciones sobre la Educacin Ambiental de los docentes
participantes en la Red Andaluza de Ecoescuelas. Departamento de Mtodos de
Investigacin e Innovacin Educativa. Universidad de Mlaga.
Organizacin de las Naciones Unidas para la Educacin, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
(1977). Informe final ED-76/WS/95. Seminario Internacional de Educacin
Ambiental. Belgrado, Yugoslavia, 13-22 de octubre de 1975. Pars, Francia: Autor.
Organizacin de las Naciones Unidas para la Educacin, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
(1978). Conferencia Intergubernamental sobre Educacin Ambiental organizada por
978-84-695-8363-0
406
978-84-695-8363-0
407
Resumen
El trabajo que presentamos se enmarca en el proyecto interuniversitario I+D+i (EDU 200913195) titulado Enfoques de aprendizaje de los estudiantes universitarios, metodologas
docentes y contextos institucionales al inicio, intermedio y final de la carrera en el marco de
implantacin de los nuevos ttulos. La implantacin del Espacio Europeo de Educacin
Superior (EEES) promueve cambios importantes en concepcin de la enseanza y el
aprendizaje en las diferentes materias y en los distintos elementos que comporta la relacin
profesor-alumno. Uno de stos, el de la metodologa docente, se presenta como foco de
estudio en el trabajo que presentamos. Analizaremos las modalidades metodolgicas, las
preferencias de los estudiantes en este aspecto en diferentes cursos y titulaciones.
Finalmente, nos interesa la relacin existente entre las preferencias metodolgicas de los
estudiantes, las utilizadas por el profesorado y el enfoque de aprendizaje de cada estudiante
(profundo o superficial). Tambin consideraremos si se produce una evolucin en los
alumnos a lo largo de los diferentes cursos de sus estudios de grado.
Descriptores: educacin superior, enfoques de aprendizaje, metodologas docentes,
evaluacin educativa, Espacio Europeo de Educacin Superior (EEES).
Abstract
The approaches and results that are exposed here are framed in an Educational Research
Project entitled "Approaches to learning of university students, teaching methodologies and
institutional contexts at the beginning, half and end of the degree in the process of
establishment of the new degrees. The implantation of the European Higher Education Area
(EHEA) promotes major changes in the conception of teaching and learning in different
subjects and elements involved in that teacher-student relationship. One of these, the teaching
methodology, is presented here as the focus of study. Methodological patterns and the
students' preferences in different courses and degrees are analyzed. The final aim of the study
is the relationship between the methodological preferences of the students, those used by
teachers and the learning approach of each student (deep or shallow). We will also consider
whether there is a shift in the students along the various courses of their undergraduate
studies.
23
El trabajo se encuadra en el contexto ms amplio del proyecto I+D+i Enfoques de aprendizaje de los
estudiantes universitarios, metodologas docentes y contextos institucionales al inicio, intermedio y final de
carrera en el marco de implantacin de los nuevos ttulos. EDU2009-13195-Subprograma EDUC.
Universidades de Oviedo, Pas Vasco y Cantabria. Son coautores del trabajo Argos, J., Castro, A. y Ezquerra, M
P. de la Universidad de Cantabria.
978-84-695-8363-0
408
Introduccin
El Espacio Europeo de Educacin Superior (EEES) propona cambios en relacin con
los planteamientos metodolgicos y las estrategias didcticas desplegadas por el profesorado
en los procesos de enseanza-aprendizaje. Esto, a su vez, debera implicar cambios en los
enfoques de aprendizaje con los que los estudiantes abordan su trabajo. En trabajos anteriores
hemos constatado algunas de las vinculaciones existentes en este mbito (Argos et al., 2011a;
Osoro et al., 2011 y Salvador et al., 2011).
Las referencias sobre los enfoques de aprendizaje (en algunos casos estilos de
aprendizaje) en la literatura nacional e internacional son muy amplias. Buena parte de ellas
surgen de los trabajos de Biggs, 1988, 1993 y Biggs et al., 2001. En el mbito nacional
queremos resaltar las contribuciones de Hernndez, 2003; Barca, 1999; De la Fuente y
Martnez, 2003 y Gargallo et al., 2009.
Como hemos indicado en otras ocasiones, los enfoques de aprendizaje integran tanto
la motivacin que el estudiante tiene para realizar una tarea como las estrategias que va a
utilizar para conseguirlo. En trabajos previos (Argos et al., 2011a y 2011b; Salvador et al.,
2011; Castro et al., 2012) hemos dimensionado y definido la intensidad de la profundidad del
enfoque como un continuo bipolar que se puede desplazar, incluso en el mismo sujeto, desde
lo ms superficial a lo ms profundo (desde la motivacin extrnseca, el inters escaso por la
materia, la memorizacin excesiva y mecnica sin acompaamiento comprensivo, cierto
miedo al fracaso hasta la motivacin intrnseca, el inters por las materias, la utilizacin de
estrategias de comprensin, etc.).
Tenemos la tendencia a pensar que el estudiante con mayor profundidad en su enfoque
es el mejor estudiante al utilizar las mejores estrategias y obtener los resultados ptimos. Sin
embargo, como ya hemos indicado en Castro et al., 2012, esto no es as necesariamente.
Creemos que el estudiante competente no se enfrenta en todo momento a las tareas con un
enfoque profundo, sino que ajusta la intensidad del enfoque al tipo de tarea, a las estrategias
metodolgicas y a los requisitos evaluativos planteados por el profesorado. Debemos de
sealar, no obstante, que no existe una vinculacin directa entre los enfoques de aprendizaje,
las estrategias que el estudiante utiliza para enfrentarse a las tareas y los resultados obtenidos
(Ezquerra et al., 2012). Por ello podemos decir que los enfoques no son estables e
inalterables, sino que dependen del contexto y de la tarea a realizar. Dicho de otra forma, las
metodologas ms centradas en la enseanza, con mtodos ms expositivos, procedimientos
cerrados y nicos de evaluacin requeriran enfoques ms superficiales por parte de los
estudiantes mientras que, por contra, las metodologas ms centradas en el aprendizaje y con
una evaluacin formativa exigiran un enfoque de aprendizaje ms profundo.
Aunque sera de inters, por limitaciones de espacio, no podemos entrar en el anlisis
de los enfoques y concepciones docentes, en la lnea de Freixas, 2010, y los enfoques de
aprendizaje de los estudiantes.
978-84-695-8363-0
409
Mtodo
Diseo y procedimiento
El estudio analiza las caractersticas de los estudiantes que se han ido incorporando a
la Universidad de Cantabria desde el curso 2009/10 hasta el 2012/13. Se pretende conocer
cmo evolucionan los enfoques de aprendizaje de los estudiantes en el inicio, el intermedio y
el final de la carrera. Se ha utilizado una metodologa mixta que integra procedimientos y
tcnicas tanto cuantitativas (cuestionarios a estudiantes y a docentes) como cualitativas
(grupos de discusin con estudiantes y con docentes, por separado) y con un carcter
longitudinal. Los datos de los cuestionarios a profesores se han descartado por su escaso
nmero. Los datos cualitativos no son objeto de anlisis en este trabajo y su tratamiento se
realizar mediante el ATLASti en otro lugar que permita una mayor extensin en el anlisis.
Participantes
Pese a que el proyecto de investigacin tiene un carcter interuniversitario
(Universidad de Cantabria, del Pas Vasco y de Oviedo), la muestra objeto de estudio la
conforman algunas titulaciones de la Universidad de Cantabria con la distribucin que
aparece en la Tabla 1.
Tabla 1
Distribucin de los estudiantes de la Universidad de Cantabria
Gnero
N
%
Curso
N
%
Facultad
Educacin
Filosofa y Letras
Medicina
Total
Varn
324
28.7
1
770
68.1
N
727
333
71
1131
Mujer
803
71.3
2
328
29.0
%
64.3
29.4
6.3
100
Total
1127
100
3
33
2.9
Titulacin
Geografa
Historia
Maestro Educacin
Infantil
Maestro Educacin
Primaria
Medicina
Total
Total
1131
100
N
97
236
%
8.6
20.9
304
26.9
423
37.4
71
1131
6.3
100
Dimensiones y variables
Para pulsar la opinin de los estudiantes se dise un cuestionario que, como ya
hemos comentado en anteriores trabajos (Argos et al., 2011a y 2011b) y tras su
correspondiente proceso de validacin, qued finalmente compuesto por 177 tems para
primer curso 24. y de 168 para los posteriores.
Las variables primarias se agruparon en dimensiones cuya definicin y
fundamentacin se ha descrito en otros trabajos (Ezquerra et al., 2012 y Castro et al., 2012).
Reflejamos a continuacin, aquellas que son relevantes para el estudio que presentamos.
24
978-84-695-8363-0
410
978-84-695-8363-0
411
En este punto pretendemos dejar constancia de las diferencias entre las variables
objeto de estudio en funcin de los distintos agrupamientos de los estudiantes segn algunas
caractersticas como sexo, curso, titulacin, enfoque de aprendizaje y enfoque profundoestratgico de aprendizaje. Limitaremos nuestros comentarios a los casos en que los
resultados resultaron estadsticamente significativos (p.05) mediante contraste de medias
ONEWAY y post hoc de Scheff.
Atendiendo a la variable Sexo, se constata lo siguiente (ver figura 2):
Todas las diferencias resultaros estadsticamente significativas al nivel establecido.
978-84-695-8363-0
412
Figura 3. Representacin de las medias en preferencias y usos metodolgicos segn categoras por
curso (escala 1-5: Muy poco Mucho)
978-84-695-8363-0
413
Conclusiones
Como se ha podido apreciar en el anlisis de resultados, los estudiantes muestran
preferencias metodolgicas diferenciadas en funcin del gnero, del curso, de la titulacin y
del enfoque de aprendizaje concreto del estudiante.
A la vista de los resultados expuestos, podemos concluir que las preferencias del
alumnado coinciden, en trminos generales, con lo propugnado en el marco del
Espacio Europeo de Educacin Superior. Los estudiantes prefieren estrategias
metodolgicas con orientacin prctica, ejercicios de grupo y exposiciones, por este
orden. Los profesores deberamos adoptar, sobre todo, esa orientacin ms prctica ya
que el uso de los ejercicios de grupo y de la tcnica expositiva coincide bsicamente
con lo preferido por los estudiantes.
Las alumnas tienen una mayor preferencia por los ejercicios en grupo, la orientacin
prctica y la tcnica expositiva frente a los alumnos. Adems, las alumnas tienen una
mayor intensidad de la profundidad del enfoque de aprendizaje. Teniendo en cuenta
este patrn el profesorado debera adoptar estrategias metodolgicas, en la medida de
lo posible, diferenciadas ajustndose a la preferencia y al enfoque de aprendizaje
prioritario en cada grupo segn se trate de alumnos o de alumnas.
978-84-695-8363-0
414
En relacin al curso, los estudiantes de los primeros cursos prefieren los ejercicios en
grupo. Hay coincidencia entre preferencias y usos metodolgicos en el sentido que los
profesores hacen un uso ms frecuente de la tcnica expositiva en 3 y de los ejercicios
en 1 frente a 3. Por todo ello, parece aconsejable que en los primeros cursos se
trabaje ms en grupos y se vaya introduciendo progresivamente mayor carga de
tcnica expositiva con ejercicios individuales durante las clases en los ltimos cursos y
no al revs que es como se suele hacer en muchas disciplinas que se consideran
bsicas..
Estos resultados abundan en la teora de que se producira una mejor adaptacin de la
enseanza a las caractersticas y al contexto (enfoque) de aprendizaje de los estudiantes y, por
ello, una mejora de la calidad de la enseanza siempre que se consigan las competencias
planteadas en el ttulo correspondiente y que las estrategias metodolgicas sean coherentes
con las estrategias evaluativas.
Referencias
Argos, J., Castro, C., Ezquerra, M P., Osoro, J. M. y Salvador, L. (2011a). Estudio de los
contextos de enseanza y aprendizaje universitarios percibidos por estudiantes y
profesores: avance de resultados de la percepcin de los estudiantes. En J.J. Maquilln et
al. (Coords.), Innovacin educativa en la enseanza formal (pp. 795-804). Murcia:
Editum.
http://edit.um.es/library/docs/books/9788469428429.pdf
(consultado
15/02/2013).
Argos, J., Castro, C., Ezquerra, M P., Osoro, J. M. y Salvador, L. (2011b). Percepcin de los
estudiantes universitarios sobre los contextos de enseanza y aprendizaje en las nuevas
titulaciones de Grado. En J. Romn, M.A. Carbonero y J. Donoso (Comp.), Educacin y
desarrollo en una sociedad multicultural (pp. 2665-2681). Madrid: Asociacin de
Psicologa y Educacin.
Barca, A. (1999). CEPEA. Cuestionario de Evaluacin de Procesos de estudio y Aprendizaje
para el alumnado universitario. Manual. A Corua: Publicaciones de la Revista Galego
Portuguesa de Psicoloxia e Educacin.
Bigss, J. (1988). Approaches to learning and to essay writing. En Schmeck, R. (Ed.), Learning
strategies and learning styles. New York: Plenum Press.
Bigss, J. (1993). What do inventories of students learning processes really measures? A
theoretical review and clarification. Brithish Journal of Educational Psychology, 63, 319.
Biggs, J., Kember, D. y Leung, D. (2001). The revised two-factor Study Process
Questionnaire: R-SPQ-2F. British Journal of Educational Psychology, 71, 133-149.
Castro, A., Ezquerra, P., Argos, J., Osoro, J.M. y Salvador, L. (2012). Dimensionalidad de los
enfoques de aprendizaje de los estudiantes universitarios. Actas del V Congreso Mundial
de Estilos de Aprendizaje. Santander: Universidad de Cantabria.
http://grupos.unican.es/mide/medea/documentacion/publicaciones/Dimensionalidad y
perfiles enfoques estud universitarios.pdf (consultado 15-02-2013).
978-84-695-8363-0
415
978-84-695-8363-0
416
Resumen
Este artculo se enmarca dentro de los objetivos de la Red Espaola de Evaluacin
Formativa que agrupa a ms de 60 profesores de diferentes universidades espaolas, cuyo
propsito es implementar sistemas de evaluacin formativa y participativa que permitan
afrontar con garantas los principios pedaggicos que emergen del EEES. Los resultados
presentados son fruto de la aplicacin de un cuestionario a 55 estudiantes de Grado de
Maestro de la Universidad de Cantabria. Los resultados indican que la adquisicin de
competencias por parte de los estudiantes participantes es bastante heterognea, deduciendo
que la metodologa empleada y las competencias adquiridas estn correlacionadas.
Observamos adems ventajas en el sistema de evaluacin formativa, tanto para el alumnado
como para el profesorado, entre ellas una mayor implicacin, motivacin y autonoma de los
estudiantes. Tambin se detectaron dificultades, como el exceso de trabajo para el
profesorado o el desconocimiento de los procesos de evaluacin formativa en los estudiantes.
Descriptores: evaluacin formativa,
competencias.
docencia
universitaria,
metodologas activas,
Abstract
This article is part of the objectives of the Spanish Network Formative Assessment that
includes more than 60 teachers from different Spanish universities, whose purpose is to
implement formative assessment systems and enabling participatory successfully tackle the
emerging pedagogical principles of the ESHE. The results presented are the result of the
application of a questionnaire to 55 students of Master Degree from the University of
Cantabria. The results indicate that the acquisition of skills by participating students is quite
heterogeneous, deducing that the methodology used and the skills acquired are correlated.
We further advantages in the formative assessment system, both for students and for teachers,
including greater involvement, motivation and learner autonomy. Difficulties were also
detected, as overwork for teachers or lack of formative evaluation processes on students.
Keywords: formative assessment, university teaching, active methodologies, competences.
978-84-695-8363-0
417
Introduccin
El paradigma formativo en el Espacio Europeo de Educacin Superior enfatiza un
modelo de formacin centrado en el trabajo y aprendizaje del estudiante, mediante el
desarrollo de competencias generales y especficas, que posibilitan un aprendizaje continuo a
lo largo de toda la vida y una adaptacin a la variedad y pluralidad cultural de nuestro
contexto europeo actual.
Segn este lenguaje e impulso, el trabajo en grupo, la formacin de equipos de
aprendizaje, el desarrollo de actitudes de cooperacin, etc., constituyen una variable
importante en la formacin bsica en Enseanza Superior, de cara no slo a una eficaz
integracin de los futuros titulados en el mbito laboral, sino a la formacin de ciudadanos
responsables, participativos, crticos y creativos. Por tanto, no se trata tan solo de un cambio
administrativo del sistema de crditos (ECTS), supone un replanteamiento pedaggico global
y de raz. Aportaciones recientes de Armenta, Salinas y Mortera (2013), Gozlvez, Traver y
Garca Lpez (2012), Camili, Lpez Gmez y Barcel, (2012), Len, Felipe, Iglesias y Latas,
(2012), Lpez Facal y Santidrin (2011), Fraile (2008), Valls, Soler y Flecha (2008) proponen
experiencias de adaptacin de metodologas didcticas y organizativas interesantes, resaltando
cmo ayudan a que los estudiantes expresen lo que sienten sobre su prctica, sin temor al
poder calificador del profesor, permiten el ejercicio de adaptacin a situaciones nuevas en el
medio facilitando el desarrollo, promueven el aprendizaje profundo mediante el razonamiento
crtico de la situacin problemtica, el aprendizaje autodirigido mediante el anlisis y la
investigacin individual, fomentan el involucramiento intelectual e incrementan el
aprendizaje instrumental gracias a las interacciones entre iguales.
A su vez, en este proceso de convergencia la actividad docente adquiere tambin
nuevos enfoques y es necesario no solo que se actualice, sino que se forme y tome decisiones
en torno a los procedimientos, recursos y evaluacin a llevar a cabo en las diferentes fases de
diseo y desarrollo de sus asignaturas.
De las mltiples clasificaciones, descripciones y recomendaciones sobre las
modalidades de enseanza y los mtodos pertinentes de cara al EEES (De Miguel, M., 2006),
hemos optado por proponer a los estudiantes estrategias y metodologas como el aprendizaje
basado en problemas, el aprendizaje cooperativo, la leccin magistral participativa, los
debates, las tertulias dialgicas y la consulta bibliogrfica, con las que pretendemos potenciar
y desarrollar no solo contenidos, sino competencias.
Creemos que uno de los mayores inconvenientes a la hora de mejorar la participacin
y la motivacin por aprender, nace de la incorrecta aplicacin de metodologas activas y la
aplicacin sostenida de tcnicas de evaluacin tradicionales, que han mediatizado
permanentemente el modo de aprender de los estudiantes, decantndolo hacia un estilo de
aprendizaje memorstico y rutinario poco til. La consecuencia por tanto, ha sido un estilo de
aprendizaje muy alejado del que realmente se espera en la sociedad actual y con el que resulta
complicado desarrollar una serie de competencias y habilidades socio-profesionales para
lograr integrarse en la sociedad y el mercado laboral del siglo XXI satisfactoriamente.
La concepcin de la evaluacin formativa de los miembros de la Red incorpora un
matiz nuevo, en el sentido de que consideramos que sta tambin debe ser compartida (Lpez
Pastor, 2008; Lpez Pastor et al, 2009). Esto significa, bajo nuestro punto de vista, que la
evaluacin formativa se ha de sustentar en procesos continuos de dilogo sobre la valoracin
978-84-695-8363-0
418
978-84-695-8363-0
419
978-84-695-8363-0
420
978-84-695-8363-0
421
Una amplia mayora de estudiantes (89%) considera que el programa fue explicado
claramente antes de comenzar a desarrollarlo. El 91% valora muy positivamente el uso de las
metodologas propuestas a la hora de adquirir de competencias socio-profesionales. En cuanto
a la consideracin de la evaluacin formativa un 84% de estudiantes estima que constituye un
sistema facilitador de la adquisicin de las citadas competencias.
Los grficos de barras que aparecen seguidamente representan la puntuacin media
que los alumnos han otorgado a las diferentes opciones que se les ha presentado dentro de
cada bloque temtico (metodologas, instrumentos empleados, adquisicin de competencias,
evaluacin). Las puntuaciones oscilan desde 0 hasta 5, siendo la opcin 5 la que se
corresponde con el mximo grado de acuerdo.
En los Grficos 7 y 8 sealamos las metodologas y estrategias que ms han utilizado
en la asignatura, siendo las tcnicas del aprendizaje cooperativo, la consulta bibliogrfica en
bases de datos y el cuaderno o similar, aquellas a las que ms se han recurrido para resolver
las tareas propuestas.
Grfico 7: Consideracin
metodologas
978-84-695-8363-0
de
las
diferentes
422
Grfico 9: Consideracin
evaluacin
respecto al sistema de
978-84-695-8363-0
423
las
978-84-695-8363-0
424
Grfico 11: Grado de acuerdo con las afirmaciones relativas al sistema de evaluacin formativo de la
asignatura
Grfico 12: Grado de acuerdo con las afirmaciones relativas al sistema de evaluacin continua de la
asignatura
978-84-695-8363-0
425
Por otro lado, se recoge una muestra de las respuestas abiertas ms significativas
ofrecidas por los estudiantes de esta asignatura ante la dimensin de Satisfaccin Global con
la metodologa de la asignatura: ventajas e inconvenientes de la metodologa del portafolio y
la rbrica como evaluacin formativa. Las respuestas relativas a las ventajas e
inconvenientes de esta experiencia de trabajo a travs de un portafolio reflexivo y una
evaluacin formativa fueron categorizadas por el profesorado.
Ventajas
Con estas metodologas, las temticas se tratan con ms profundidad.
Las actividades grupales son eficaces para consolidar aprendizajes y contrastar ideas
Las rbricas de evaluacin ofrecen la posibilidad de comprender, rehacer los trabajos
y llegar a una metacognicin
La reflexin implica relacionar la teora y la prctica, por tanto encontrar sentido a lo
que se estudia.
Inconvenientes
Exige mucho tiempo de dedicacin, dentro y fuera de clase.
Estresa utilizar metodologas, que nicamente se emplean en esta asignatura y para el
resto hay que cambiar la dinmica, organizacin, temporalizacin, normas, etc.
Estas metodologas requieren competencias no desarrolladas antes durante la carrera:
autoplanificacin, creatividad, indagacin, crtica constructiva.
Discusin y conclusiones
Como acabamos de analizar, es imprescindible seguir potenciando entre el
profesorado universitario la utilizacin de metodologas activas y la evaluacin formativa que
potencien una participacin activa y reflexiva en los estudiantes, de cara a conseguir adquirir
y desarrollar una serie de competencias socio-profesionales requeridas no solamente por el
mercado laboral sino por la sociedad en general, autores como Len, Felipe, Iglesias y Latas,
(2012) y Lpez Pastor (2009) constatan con certeza cmo los estudiantes mejoran sus
aprendizajes y lo que es ms llegan a una metacognicin del proceso seguido para llegar a
alcanzarlos.
A su vez somos conscientes que los inconvenientes revelados por los estudiantes
suponen un reto para el profesorado, dado que indirectamente nos estn solicitando una mayor
coherencia entre contenidos, competencias, actividades y tiempo para desarrollarlas.
Igualmente se deduce que el profesorado ha de coordinarse entre s a la hora de proponer no
solo contenidos sino tareas prcticas individuales o grupales para no saturar al estudiante con
excesiva carga prctica, la cual cobrara mucho mayor sentido terico si se relacionase una
misma tarea, actividad o proyecto con contenidos de diferentes materias de una misma
titulacin. Sera necesario por tanto, configurar espacios, recursos, medios y horarios para
adaptar a la universidad las metodologas activas (Len, Felipe, Iglesias y Latas, 2012).
En definitiva, las evidencias presentadas de muestran que la valoracin de los
estudiantes ante las metodologas activas y la evaluacin formativa es muy positiva, por tanto
creemos que la aplicacin de estas metodologas, requieren no solo un esfuerzo de diseo,
seguimiento y valoracin por parte del profesorado, sino tambin un cambio de mentalidad y
978-84-695-8363-0
426
de estilo de aprendizaje del estudiante universitario que en gran medida se haba acomodado o
conformado con un estilo un tanto ms pasivo y asimilativo.
Referencias
Armenta, M.D., Salinas, V. y Mortera, F.J. (2013). Aplicacin de la tcnica educativa
aprendizaje basado en problemas para capacitacin a distancia (e-learning). RIED:
Revista Iberoamericana de Educacin a Distancia, 1 (16), 57-83.
De Miguel, M. (Dir.) (2006). Modalidades de enseanza centradas en el desarrollo de
competencias. Madrid: Ministerio de Educacin y Ciencia.
Fraile, A. (2008). El aprendizaje cooperativo como metodologa para el desarrollo de los
ECTS: una experiencia de formacin del profesorado de educacin fsica. Fuentes:
Revista de la Facultad de Ciencias de la Educacin, 8, 22-36.
Gozlvez, V., Traver, J.A. y Garca Lpez, R. (2012). El aprendizaje cooperativo desde una
perspectiva tica. ESE: Estudios sobre Educacin, 21, 181-197.
Len, B., Felipe, E., Iglesias, D. y Latas, C. (2012). El aprendizaje cooperativo en la
formacin inicial del profesorado de Educacin Secundaria. Revista de Educacin,
354, 715-729.
Lpez Facal, R. y Santidrin, V.M. (2011). Los conflictos sociales candentes en el aula. Iber:
didctica de las ciencias sociales, geografa e historia, 69, 8-20.
Lpez Pastor, V. (2008). Desarrollando sistemas de evaluacin formativa y compartida en la
docencia universitaria. Anlisis de resultados de su puesta en prctica en la formacin
inicial del profesorado. European Journal of Teacher Education, 3(31), 292-311.
Lpez Pastor, V. (Ed.) (2009). La evaluacin formativa y compartida en docencia
universitaria. Madrid: Narcea.
Martnez Muoz, L.F., Castejn, F.J. y Santos, M.L. (2012). Diferentes percepciones sobre
evaluacin formativa entre profesorado y alumnado en formacin inicial en educacin
fsica. REIFOP, 15 (4). (www.aufop.com) (15-03-2013).
Navarro-Adelantado, V., Santos, M.L., Busc-Donet, F., Martnez-Mnguez, L. y Martnez
Muoz, L.F. (2010). La experiencia de la red universitaria espaola de evaluacin
formativa y compartida: proceso y abordaje. Revista Iberoamericana de Educacin,
52(7).
Valls, R., Soler, M. y Flecha, R. (2008). Lectura dialgica: interacciones que mejoran y
aceleran la lectura. Revista Iberoamericana de Educacin, 46, 71-88.
978-84-695-8363-0
427
Resumen
Con este trabajo queremos analizar y poner en valor perfiles de mujeres emprendedoras que
constituyan nuevos referentes para el fomento del emprendimiento femenino. Para ello,
realizamos un estudio cualitativo basado en grupos de discusin. Participan 8 mujeres
andaluzas con edades comprendidas entre 25 y 60 aos de distintos sectores empresariales y
cuyas empresas se encuentran en diferente nivel de desarrollo. Se realiza un anlisis del
discurso a travs de atlas-ti de carcter inductivo e interpretativo. Los resultados muestran
como obstculos tangibles aspectos como: la burocracia, la escasez de ayudas econmicas y
la conciliacin familiar; e invisibles: las creencias sociales sobre el empresariado y la
valoracin social de la mujer empresaria. Entre los factores facilitadores, se aluden a
recursos internos como cualidades y valores personales. Mientras que entre los recursos
externos la visin de la economa domstica como herencia familiar femenina y el apoyo
institucional, especialmente el de la Asociacin de empresarias de Sevilla (AES), son
valorados positivamente.
Descriptores: desarrollo profesional; barreras de gnero; emprendimiento femenino;
estudios de las mujeres; cuestiones de gnero.
Abstract
This paper attempts to analyze and give value to women entrepreneurs who are new
standards for the promotion of female entrepreneurship. For to do that, we carry out a
qualitative study based on focus groups. 8 andalusian women aged 25 and 60 years of
different business sectors and whose companies are at different levels of development
participate in this study. We apply a discourse analysis with Atlas-ti using an inductive and
interpretive approach. The results show visible obstacles such as bureaucracy, lack of
financial support and family reconciliation and invisible obstacles such as social beliefs on
entrepreneurship in general and the social value of women entrepreneurs. As facilitators
factors, they allude to internal resources such as qualities and values as the practicality.
While external resources include the vision of the domestic economy as female family
heritage and institutional support, especially Entrepreneurs Association of Seville (AES), are
valued positively.
Keywords: professional development, gender barriers, female entrepreneurship, gender
issues, women studies.
978-84-695-8363-0
428
Introduccin
En las ltimas dcadas el reconocimiento y promocin del emprendimiento es una de
las prioridades de la mayor parte de las sociedades avanzadas. Se trata de una tendencia que
tiene como base el reconocimiento de la creacin de empresas como fuerza motriz de
desarrollo de las naciones y regiones, la creacin de empleo, y de la innovacin. De ah el
inters de gobiernos y organizaciones por el fomento del espritu empresarial como lnea
fundamental de sus propuestas polticas de empleo. Se parte de una afirmacin clara: la
creacin de una empresa es una decisin personal, pero este aserto que puede resultar tan
obvio est envuelto en ciertos condicionantes, por ejemplo, el gnero. En efecto, el Informe
Global 2010 del GEM (Kelley et al., 2011) pone de manifiesto que la actividad emprendedora
depende del gnero, siendo mayor la tasa de actividad masculina. No obstante, estas
diferencias de participacin en la actividad empresarial pueden tener relacin con dificultades
y obstculos especficos que las mujeres tienen (Minniti y Arenius, 2003). Partiendo de una
distribucin igualitaria de las habilidades empresariales en el conjunto de la poblacin, Alsos
y Ljunggren (1988) mostraron que la reducida presencia de las mujeres se deba a la
existencia de barreras sociales vinculadas a los roles atribuidos y desempeados por la mujer
y a los prejuicios y estereotipos de sus capacidades y habilidades para el desempeo de ciertas
actividades profesionales (Kantor, 2002).
En el mbito educativo, los estudios sobre orientacin y desarrollo profesional de las
mujeres se han interesado por las expectativas y aspiraciones que inciden en sus decisiones
laborales y en la consecucin de logros profesionales. Estudios anteriores (Rebollo, Gonzlez
y Garca-Prez, 2001) han mostrado obstculos en el desarrollo profesional de las mujeres. En
su estudio, Donoso, Figuera y Rodrguez (2011) documentan la predominancia de un
liderazgo competencial basado el trabajo en equipo, la gestin y organizacin y el desarrollo
de un buen clima de trabajo as como el hecho de que aunque las mujeres valoran el mundo
profesional buscan compatibilizarlo con otros roles vitales y su satisfaccin se asocia a la
planificacin de su trayectoria profesional y la anticipacin de los conflictos de roles.
Precisamente algunos trabajos previos sealan la multiplicidad de roles que se superponen en
la vida de las mujeres (Coria, Freixas y Covas, 2005; Biggs y Brough, 2005) y que es preciso
considerar en el anlisis y comprensin de las trayectorias profesionales de las mujeres.
Gimeno y Rocabert (1998) sealan la evidencia de que el desarrollo de la carrera de la
mujer no slo es diferente al de los hombres, sino ms compleja debido a la influencia que
ejercen en su caso esas otras facetas. Paula Nicholson (1997) considera en el desarrollo de las
carreras de las mujeres existen barreras visibles como las responsabilidades familiares que
asumen las mujeres como una rol social atribuido, barreras invisibles como las actitudes, las
creencias y conductas de los hombres en el contexto laboral que conforman la cultura de las
organizacin; y barreras derivadas del impacto psicolgico inconsciente que esta cultura
androcntrica de las organizaciones tiene sobre la motivacin de la mujer, su autoestima, etc.,
Snchez-Apellniz (1999) plantea que la creacin de empresas se adopta como una estrategia
de acoplamiento por las mujeres para compatibilizar sus carreras con el cuidado de los hijos,
las tareas domsticas, etc.
Con este estudio queremos conocer qu aportan las mujeres al emprendimiento a partir
de los recursos personales y sociales que movilizan en el desarrollo de sus proyectos, con el
fin de disear propuestas educativas para el fomento y promocin del emprendimiento en
978-84-695-8363-0
429
mujeres jvenes universitarias. Este trabajo se suma a otros (Brush, de Bruin y Welter, 2009;
Castao, 2009; McGowan, Lewis, Cooper y Greenan, 2012) que se han centrado en las
experiencias de las mujeres emprendedoras tratando de identificar las estrategias que usan
para superar obstculos y se asocian al xito y sostenibilidad de sus negocios. Con ello
queremos analizar y poner en valor perfiles de mujeres emprendedoras que constituyan
nuevos referentes para el fomento del emprendimiento femenino.
Mtodo
En esta investigacin se ha hecho uso de una metodologa de corte cualitativo
mediante la tcnica de grupos de discusin. Se han realizado dos sesiones con dos grupos
integrados por mujeres emprendedoras que desarrollan sus negocios en Sevilla capital y su
provincia. El rol moderador fue asumido por las dos profesoras firmantes de este artculo y se
realizaron en intervalos temporales de mayo/junio de 2012.
En su composicin nos encontramos con emprendedoras fundadoras, as como
emprendedoras de segunda generacin (empresas familiares). La seleccin se realiza al
amparo de la Asociacin de Empresarias de Sevilla (AES), que nos hizo posible la
introduccin en el crculo empresarial y la seleccin del perfil potencial entre sus asociadas,
con base a los siguientes aspectos: (a) liderazgo directivo: mujeres fundadoras de sus actuales
negocios y/o continuadoras directivas de segunda generacin, (b) experiencia: emprendedoras
de ms de 5 aos, y (c) ramas de actividad: empresas o negocios de diferentes sectores
empresariales.
Para la dinmica de los grupos fue elaborada una gua con temas especficos, entre los
que son especialmente reseables, aspectos como: la autopercepcin de sus cualidades y
competencias como empresarias, cmo surge la idea de emprender, y, especficamente
recursos facilitadores, o en su defecto, barreras en su actividad emprendedora. En este sentido
el entorno tiene un peso especfico: la aceptacin social que tienen las mujeres que crean
negocios, los apoyos o frenos que reciben del entorno familiar, institucional o financiero. Las
diferencias existentes en la actividad empresarial por gnero son provocadas, de acuerdo con
De la Vega (2008), por los determinantes psicolgicos y sociales de las mujeres; a saber, son
ms modestas a la hora de evaluar sus habilidades para la creacin de empresas; muestran una
mayor aversin al riesgo y perciben menores oportunidades para la creacin de empresas en
su zona.
La transcripcin de los grupos de discusin ha sido realizada con las convenciones del
anlisis conversacional adaptadas por Cubero (2000). Con el celo que requiere la identidad y
confidencialidad de los discursos, han sido modificados nombres y cualquier marca
identificativa de las empresarias participantes. En el procesamiento de la informacin se ha
utilizado el programa Atlas-Ti para el anlisis cualitativo, desarrollndose en dos fases: a) en
primer lugar se opt por una codificacin abierta, utilizando cdigos in vivo, lo que supone
el uso de las palabras exactas verbalizadas por las empresarias a modo de categoras que
reflejasen el sentido ms literal del discurso. La identificacin de dichas categoras estaban
relacionadas, grosso modo, con dos grandes campos: factores bloqueadores y factores
facilitadores en el desempeo de su actividad empresarial. A su vez, ambos, eran segmentados
en factores de tipo social e individual y, b) en segundo lugar, con el uso de una aproximacin
iterativa, se efectuaron agrupaciones que nos permitieran percibir un modelo global con la
categorizacin social e individual en ambos campos (frenos y recursos facilitadores), para lo
cual se emplea un mtodo comparativo constante arroje luz sobre las regularidades y
978-84-695-8363-0
430
asociaciones entre categoras, para lo cual se hace uso de la opcin networks, opcin del
programa informtico, y de las memos que favorecen la construccin de interpretaciones
discursivas del modelo comprensivo sobre los factores obstaculizadores y facilitadores de las
mujeres emprendedoras.
Resultados
Factores bloqueadores sociales
Se identifican como factores visibles: las dificultades para conciliar la vida laboral y
familiar, y la financiacin. Como factores invisibles: las creencias sociales respecto al
empresariado que condicionan en gran medida su identificacin.
- Conciliacin. El factor bloqueador social ms recurrente en los discursos de las mujeres
alude a sus dificultades para conciliar su proyecto personal y profesional. El siguiente extracto
muestra esta experiencia:An:para m entender, el mayor obstculo que tiene una mujer, es
esa conciliacin, y que esa capacidad que tengan los hombres a la hora de que estamos
reunidos, que tenemos un negocio, tratamos un asunto, pero que estn pensando que se
tienen que ir y que tienes otros asuntos que atender en casa, yo a ellos no los veo no?. Es
que, ellos estn muy relajados yo he tenido al nio y yo me incorpor a los 15 das y tena
el parquecito del nio mi lado, y tena que darle el pecho, me iba al despacho de al lado,
Si tienes una reunin, por favor, darle una vueltecita al nio, que no puedo verlo.
A veces, familia y entorno se convierten en barreras para la actividad del
emprendimiento:L: Yo siempre he tenido todo el mundo en contra, todo el mundo en
contra. Cada vez que doy un paso, todo el mundo boom no. Mi marido al principio no
quera que cogiera el negocio [y ahora el no quiere que me vaya a casa, vers]. Pese a que
el apoyo familiar suele ser fundamental a la hora de emprender, no siempre es habitual. De
hecho, una vez que ellas demuestran sus capacidades en la gestin empresarial, entonces
convencen al entorno y lo van cambiando:S... Ahora, luego, cuando ya ven que te gusta, que
te mueves ms o menos bien, que consigues ms o menos tus logros, tus pequeas cositas,
pues el apoyo familiar es fundamental y hoy da, si yo no tuviera apoyo familiar en casa no
podra pasar tantas horas fuera de casa () .
- Financiacin. An:Y en cuanto a lo de la capacidad econmica, pues imagnate una
empresa que se crea de lo que no tiene nada, que ehm embarcndote en todo, poniendo
tus propios bienes a disposicin del banco, y recibes un riesgo tan grande, por lo menos mi
empresa no empieza con disposicin econmica boyante, no, no, sino con lo poquito que
tena, lo inverta e iba creciendo pero para, para disposicin del banco como garanta. O
sea, estabas en la cuerda floja constantemente. Este discurso muestra las dificultades
econmicas por las que atraviesa el ciclo vital de las empresas (liquidez). No obstante, cabe
considerar que ya en la puesta en marcha del proyecto empresarial, los varones invierten ms,
incluso el doble que las mujeres, lo cual redunda en el sector, tamao y tipo de empresa
creada (Brush, 1992). De ello podra derivarse que las emprendedoras se encuentran con
mayores obstculos para acceder al crdito y, por tanto, pueda surgir un trato discriminatorio
de las entidades bancarias (Koren, 2000).
En otro mbito, tambin encontramos estereotipos sociales sobre el empresario que
afectan negativamente al emprendimiento femenino segn lo expresado en sus propios
discursos:Ma: Es que los hombres lo que, el que dice yo soy empresario as con la boca
978-84-695-8363-0
431
grande, Uhm Lo dice porque se cree que decir solamente soy empresario es ya decir tengo
dinero, tengo poder () O sea, yo soy empresaria currante.Las mujeres marcan una
distancia respecto a esta imagen social del empresario relacionado con tener dinero, poder
e, incluso, explotador, frente a la imagen de las empresarias que son trabajadoras,
currantas, que hacen lo que les gusta. No obstante, legitiman y perpetan roles de gnero.
Las mujeres trasladan a la gestin empresarial los estereotipos y creencias sobre las
caractersticas que el patriarcado ha atribuido tradicionalmente a las mujeres como aspectos
propios y esenciales de la mujer empresaria.
Factores Bloqueadores Individuales
- Autopercepcin. Como factores bloqueadores individuales del emprendimiento femenino
identificamos la propia autopercepcin como empresarias: inseguridad, miedo al riesgo, tener
que demostrar su vala, etc. A: Ehm A ver, por supuesto el riesgo lo seguimos corriendo:
tenemos todo nuestro patrimonio puesto en los bancos, eso es no tenemos nada, yo me pasa
algo y yo me quedo sin nada y mis hijos se quedan sin nada, por supuesto. Eso, eso es algo
que hay que asumir como empresaria no? y como empresa no?...
C: yo creo que las mujeres siguen teniendo que demostrar mucho ms Que los
hombres
M: Tenemos que demostrar el doble.
Factores facilitadores sociales
- Gestin prctica. Estudios como el de Buttner (2001) pone de manifiesto cmo algunas
habilidades desarrolladas en el cuidado de las familias son percibidas por las mujeres como un
valor de la gestin empresarial para la propia organizacin. Esta tctica es representativa de la
visin que las mujeres tienen de la empresa, de su funcionamiento y de sus estilos de gestin.
En este sentido, el siguiente fragmento hace referencia a la socializacin de gnero y a su
repercusin en las estrategias de gestin de sus empresas:Aa nosotras nos diferencia eso,
el que somos personas integradas, maduras, eh globales, con una gran capacidad de
de, somos generalistas al mismo tiempo que especialistas, aplicamos todo lo que una
mujer: histricamente debe hacer en la casa, nosotras lo llevamos a la empresa, somos
gestoras porque lo traemos en los genes, y entonces (.) el trabajar en equipo el de lo
poquito sacar mucho, porque estamos aplicando lo que hemos visto ancestralmente y lo
que eh cientos de generaciones han ido haciendo y que son nuestros modelos como
mujeres no?, que son las madres y las mujeres de nuestra familia: nuestras madres, nuestras
abuelas, nuestras tatarabuelas nuestras tas....
-Apoyo Institucional. En los discursos se distinguen dos claros puntos de apoyo; por un lado,
reconocen como elemento facilitador los recursos puestos en marcha de asesoramiento
empresarial en diferentes instituciones: A: Cuando nosotras empezamos, no exista nada.
Absolutamente nada, nada, nada del verbo nada (risas)... Aqu que hay servicios en el
ayuntamientos, en todo los ayuntamientos del rea metropolitana, en la Cmara de
Comercio, en la CES, en la CEA, (.) Hay que aprovechar los recursos que hay, que hace 20
aos no existan, [tenis muchos avanzado]. Y por otro lado, identifican a la Asociacin de
Empresarias de Sevilla (AES) como fundamental para fomentar redes, hacer negocios, apoyar
a otras emprendedoras, as como sus sesiones de networking.S:y yo creo que el tema de
978-84-695-8363-0
432
las redes es fundamental, vamos, y la gente hace, claro est, que se agradece, pero en
ocasiones ests de trabajo, No? [De intercambio de experiencia, de negocios...].
An: [Y nima] una barbaridad y sobre todo, y gratificante a nivel personal de las poquitas y
muchas experiencias que tengas y que otras personas lo vean en ti como, como:: esa visin
de decir pues pueden ayudar [o hasta ah...].
Factores facilitadores individuales
-Innovacin. En los discursos se muestra cmo las empresarias son capaces de cambiar para
innovar en su empresa o negocio, sin embargo temen al riesgo. La innovacin la expresan
como: hacer cosas muy distintas con una misma idea, hay que ir innovando, innovando y
darte para que la gente vea, Nosotras dndole vueltas a la cabeza a ver cmo puedes
mejorar. Se muestran crticas en la evaluacin percibida por las resistencias de su entorno
respecto a su actividad emprendedora y ante sus propuestas de cambio e innovacin cuando se
trata de iniciar un negocio, de reorientarlo o de consolidarlo: mi padre es un hombre, uhm
no muy machista pero, es un hombre al cual le cuesta trabajo mis ideas: de loca. ()El
siempre me lo rompe todo. Despus, termina haciendo lo que yo le he dicho. Porque yo tengo
todos mis controles y dems. Porque y cuando marco una oferta o hago cualquier tema, lo
tengo todo muy estudiado. Porque yo soy mujer (risas) y lo hago todo al milmetro.
-Liderazgo - poder/autoridad. El estudio de Brush (1997) muestra que las mujeres ponen de
manifiesto en grupos de discusin sus creencias acerca de que se sienten ms cmodas en
contextos empresariales donde la cooperacin y la creacin de comunidad son aspectos
valorados:A:() Y trabajamos mucho con liderazgo compartido, que era un poco lo que
estbamos hablando de los trabajos en equipo (.) Sin saberlo no? hay veces que tu no lo
haces no? y lo que lo sabemos y explicamos, umh... trabajamos as, no? Nos toca, a veces,
en ese liderazgo compartido no nos toca tener siempre el voto del jefe. O de la autoridad,
por como haces y compartes el espacio y compartes proyectos. Las mujeres que participan
en el debate no consideran el poder como parte de su visin empresarial, no se identifican con
l y, por ello, prefieren hablar ms de reconocimiento de la autoridad que de poder y as lo
expresan: que se nos reconozca la autoridad, no el poder, nosotras somos ms de intentar
conseguir la autoridad, el poder por el poder yo creo que no es comn denominador de las
mujeres.
- Cualidades personales: las empresarias se definen con ciertas cualidades que destacan a la
hora de realizar su trabajo en su actividad o negocio, especialmente sealan: la actitud, la
implicacin, el sentido de la responsabilidad, el trabajo en equipo, el valor, la pasin en lo que
le gusta, el sentido prctico, la claridad, flexibilidad, y polivalencia, la estabilidad, ir poco a
poco y mucha conciliacin: An: Pienso que la actitud y la persona no? sobre todo como
personas. > En s, ya no como empresaria. Empresaria puede ser cualquiera que tenga esa
aspiracin. < Pero, es muy importante tener una actitud, tener el sentido de la el
equipo, el trabajo, la implicacin, y una diferencia de una mujer a un hombre, que somos (.)
que contamos muchsimo con el resto del equipo, que nos implicamos mucho en nuestro
proyectos, que hacemos que, (.) Y la mentalidad nuestra es mucha conciliacin y mucho
ms tener en cuenta la opinin del resto, y hacer negocio de todo lo poquito que tiene, como,
como (.) te pones a pensar como lo haca tu madre.
978-84-695-8363-0
433
Discusin
Una vez comentados los resultados extrados de nuestra investigacin, podemos
considerar los procesos de emprendimiento femenino como una importante fuente de
empoderamiento para las mujeres. Pese a que las emprendedoras no son las que ms
empoderadas estn, es el proceso de reeducacin social, desvalorizacin de s mismas, de
reconocimiento propio y de su entorno, lo que las ayuda a ello.
Las mujeres rehsan la identificacin con el imaginario del empresariado masculino y
reconstruyen nuevos modelos desde sus referentes ms prximos (madres, hermanas,
abuelas). La educacin y formacin para el emprendimiento ha de dotar de modelos de
mujeres empresarias que sirvan de referentes activos en la construccin de un imaginario
propio de emprendimiento femenino, que les permita identificarse y generar factores
facilitadores y no bloqueadores del emprendimiento, dada las resistencias generadas desde los
modelos de identidad empresarial masculino. Surge desde ello la dialctica entre poder y
autoridad. Ellas identifican el poder como algo propio de los empresarios, poder por el
poder, propio de un modelo autoritario, mientras ellas reivindican la autoridad, utilizando en
su gestin empresarial nuevos modelos de liderazgo compartido, de consenso y de trabajo en
equipo.
Uno de los principales factores bloqueadores es la conciliacin. Las mujeres asumen la
conciliacin personal, familiar y laboral como algo propio que les viene dado. Asumen ese rol
de gnero impuesto socialmente y no contemplan la corresponsabilidad, la responsabilidad
compartida con la pareja y con otros miembros del hogar, en el desempeo de las tareas
domsticas, adems de las laborales. Perdura la influencia de la socializacin diferenciada y
pese a estar dispuestas a asumir riesgos, innovar, construir nuevos modelos de gestin
empresarial, en el modelo familiar no se cuestionan cambiar el rol de gnero que tienen tan
interiorizado. En efecto, son capaces de innovar y adoptar cambios en la empresa pero no
modifican sus patrones con respecto a la conciliacin, no desarrollan nuevos modelos de
parejas, lo asumen en ellas mismas y no adoptan la corresponsabilidad con la pareja. En
ocasiones el apoyo familiar, que consideran fundamental y necesario a la hora de emprender,
no siempre cuentan con l, vindose empujadas a demostrar su vala.
Entre los recursos de apoyo facilitadores del emprendimiento, las mujeres tienen en
alta estima el apoyo institucionalmente, aunque remarcan el ofrecido por la Asociacin de
Empresarias de Sevilla (AES), en cuanto al asesoramiento, intercambio de experiencias,
sesiones formativas y sobre todo, las redes de contactos que les son tiles tanto como apoyo
emocional, como para hacer negocios entre ellas. Valoran positivamente la aplicacin de las
nuevas tecnologas y redes sociales en sus empresas para abrirse mercado.
En las aportaciones que hacen estas mujeres para la construccin de nuevos modelos
de empresariado femenino, aplican las tcticas de la economa y gestin del hogar a sus
negocios, apostando por el poco a poco, la flexibilidad, la estabilidad empresarial, asegurar
bien los ingresos y los cobros antes que vender mucho, asumir riesgos pero con moderacin,
etc. En cuanto a su autopercepcin, se destaca el valor, la capacidad de trabajo, el esfuerzo
personal, hacer lo que les gusta,...son ms inquietas, maduras, proactivas, prcticas, claras,
trabajadoras, familiares, de trato cercano, saben escuchar, etc.
978-84-695-8363-0
434
Referencias
Alsos, G.A y Ljunggren, E. (1998). Does the business start-up process difer by gender?
A
longitudinal
study
of
http://www.babson.edu/entrep/fer/.
nascent
enterpreneurs.
Disponible
en:
Brush, C. G. (1992). Research on women business owners: past trends and future directions.
Entrepreneurship, Theory and Practice, 16(4), 5-30.
Brush, C. G. (1997). Women-owned businesses: obstacles and opportunities. Journal of
Developmental Entrepreneurship, 2(1), 125.
Brush, C.G., A. de Bruin, y F. Welter. (2009). A gender-aware framework for womens
entrepreneurship. International Journal of Gender Entrepreneurship, 1(1), 824.
Buttner, E. H. (2001). Examining female entrepreneurs management styles: an analysis
using
a
relational
frame.
Disponible
en:
http://libres.uncg.edu/ir/uncg/f/E_Buttner_Examining_2001.pdf
Castao, C. (2009). Mujeres y poder empresarial en Espaa. Instituto de la mujer: Madrid.
Coria, C., Freixas, A. y Covas, S. (2005). Los cambios en la vida de las mujeres. Barcelona:
Paids.
Cubero, R. (2000). La construccin del conocimiento psicolgico. Un estudio de la
interaccin y el discurso en las aulas universitarias. Madrid: Ministerio de Ciencia y
Tecnologa.
De la Vega, I., Coduras, A., Cruz, C. y Justo, R. (2008). Global Entrepreneuship Monitor.
Informe Ejecutivo GEM Espaa 2007. Madrid: Instituto de Empresa.
Donoso, T., Figuera, P. y Rodrguez Moreno, M. L. (2011). Barreras de gnero en el
desarrollo profesional de la mujer universitaria. Revista de Educacin, 355, 187-212.
Gimeno, M J. y Rocabert, E. (1998) Poseen las mujeres que escogen opciones no
tradicionales para su gnero unas caractersticas en comn? Revista de Psicologa de
la Educacin, 23, 69-90.
Kantor, P (2002). Gender, microentreprise sucess and cultural context: the case of south asia.
Entrepreneurship, Theory and Practice, 26(4), 131-143.
Kelley, D., Bosma N. y Amors, J.E. (2011). Global Entrepreneurship Monitor 2010 Global
Report. Disponible en: http://www.gemconsortium.org/docs/download/266.
McGowan, P. Redeker, C.L., Cooper, S.Y. y Greenan, K. (2012): Female entrepreneurship
and the management of business and domestic roles: motivations, expectations and
realities. Entrepreneurship & Regional Development: An International Journal, 24(1),
53-72.
978-84-695-8363-0
435
978-84-695-8363-0
436
Resumen
A lo largo de los aos la Accin Tutorial en la Universidad ha ido adquiriendo distintos
niveles de relevancia y fruto de ello, son las desiguales perspectivas existentes sobre su
utilizacin e institucionalizacin. En la actualidad, con la integracin de la Universidad
Espaola en el marco del Espacio Europeo de Educacin Superior se ha intensificado todo
ello an ms. Este trabajo es parte de una tesis doctoral becada por el Ministerio de
Educacin, y sintetiza un anlisis comparativo realizado sobre la actividad tutorial
desarrollada por dos profesores universitarios muy experimentados y pertenecientes a dos
mbitos de conocimiento cientfico diferente. A travs de esta comparativa apoyada en las
respectivas historias de vida, se hace un breve recorrido por la evolucin de la funcin
tutorial en la universidad y su valoracin por parte del docente.
Descriptores: Accin Tutorial, Universidad, Mtodo Biogrfico-Narrativo, Historias de
Vida, Orientacin.
Abstract
Over the years the Tutorial Activity at the University has acquired different levels of
relevance and the product of this is that the unequal existing perspectives of their use and
institutionalization have changed. Today, with the integration of the Spanish University in the
framework of the European Higher Education Area has further intensified this. This work is
part of a doctoral thesis scholarship by the Ministry of Education and synthesizes a
comparative analysis about the activity tutorial developed by two very experienced professors
from two different fields of scientific knowledge. Through this comparative analysis,
supported by the respective life histories, we make a brief overview through the evolution of
the university tutorial function and its assessment by the teacher.
Keywords: Tutoring, University, Biographical-Narrative method, Life Histories, Guidance.
Introduccin
La presencia de la Universidad espaola en el marco propuesto por el Espacio
Europeo de Educacin Superior (EEES) ha supuesto la reorganizacin de la misma (desde el
mbito normativo o meramente institucional hasta las tradiciones ms asentadas) para poder
adaptarse a las condiciones que desde Europa se imponen. El profesorado es la figura clave en
978-84-695-8363-0
437
todo este proceso de cambio y adaptacin y por ende, ha de prestrsele especial atencin a
todo lo que le rodea, pues en base a su dimensin personal y profesional este proceso se ver
condicionado en uno u otro sentido; en concreto, en este trabajo nos centramos en una de las
funciones que consideramos ms importantes en un docente universitario: la Accin Tutorial,
la cual con la llegada de las nuevas orientaciones del EEES ha cobrado una especial
relevancia al concebir a este como un profesional que ha dejado de ser fuente de
conocimiento para desarrollar otras funciones ms cercanas al mbito personal entre las que
destacan la de gua, orientador, asesor y facilitador de recursos y herramientas para el
aprendizaje por parte del alumno (Echeverra, Figuera y Gallego, 1996; Cowan, 1999, Gross
y Roman, 2004, citados en Perandones y Lled, 2009; Gonzlez y Wagenaar, 2003 y
Martnez, 2007, citados en Martnez y Crespo, 2009), y supone uno de los grandes puntales a
los que hay que atender para valorar en qu medida se atiende a este postulado.
Para tal fin, consideramos que una de las mejores formas de aproximarnos a esta
realidad es sin lugar a dudas mediante la utilizacin de la investigacin biogrfica-narrativa.
Concretamente a travs de las Historias de Vida accedemos al marco biogrfico de cada
docente y hacemos inteligible su desarrollo profesional, as tendremos la oportunidad de
analizar los aspectos esenciales del mismo y comprender el sentido que le otorga a la
enseanza en general y a la tutora en particular, pues tal y como ha formulado
(Kelchtermans, 1991, 1993) citado en Fernndez Cruz (1995), la perspectiva biogrfica es
narrativa, constructivista -porque se elabora mediante la continua atribucin de significados,
progresivamente ms comprensivos, a las experiencias de enseanza-, contextual,
interaccionista -porque si los significados siempre se construyen en interaccin constante con
los elementos del contexto en el que suceden, esto ocurre, sobre todo, en referencia a los
elementos personales del contexto escolar, con quienes se comparte la enseanza y la vida, es
decir, con los alumnos, con los padres de alumnos, y con los compaeros, con quienes
consensuamos significados o frente a quienes construimos significados distintos- y dinmica.
Es esta una herrmienta por la que podemos explicar cmo ha evolucionado la funcin
tutorial en el profesorado universitario (en distintos mbitos de conocimiento cientfico) a
travs del tiempo (desarrollo), para lo cual, nos apoyamos en los tres factores (la trayectoria
profesional o itinerario seguido durante toda la vida para llegar a ser el profesor que ahora
es; el perfil profesional que en la actualidad se exhibe, y el ciclo vital) que sintetizan el
cuadro elaborado por Fernndez Cruz (1995) (vase grfico1).
978-84-695-8363-0
438
De tal manera que como afirma Marn (2005), esta es una forma por la que el
profesor universitario experimentado, adems de analizar su vida profesional podr ver los
cambios que se han producido, si han sido buenos o no, si sus aspiraciones de principiante se
han alcanzado, si sus proyectos de futuro y de cambio se han producido.
En definitiva, nos acerca a comprender la realidad educativa que viven hoy los
docentes universitarios en relacin al tema que nos ocupa, como as lo afirman Bolvar (1998)
para quienes la experiencia y los saberes aprendidos por el profesorado, universitario en
este caso, durante el desarrollo de su vida, personal y profesional, pueden facilitar y apoyar
nuevos procesos de aprendizaje, para lo cual las historias de vida se convierten en una
herramienta fundamental de la enseanza, o Sharkey (2004) para quien la voz de los
docentes juega un papel fundamental en la reflexin y replanteamiento del mundo educativo
universitario.
Mtodo
Este trabajo parte de un diseo metodolgico cualitativo en el que empleamos la
metodologa biogrfica-narrativa, concretamente empleamos las historias de vida, como la
tcnica principal con la que acercarnos a la realidad en la que se introduce la investigacin. La
propuesta inicialmente est diseada para aplicarse sobre un registro poblacional que
comprende a todo el profesorado de la Universidad de Huelva, en base al cual hemos
realizado un muestreo intencional partiendo de un criterio prioritario para nuestra
investigacin: el profesorado ms preocupado e implicado en proceso para la mejora de la
docencia universitaria, definido por su participacin en: (a) proyectos de innovacin docente
coordinados, (b) premios de excelencia recibidos, (c) proyectos de investigacin en docencia
universitaria coordinados, (d) acciones formativas impartidas en los planes de actuacin
978-84-695-8363-0
439
978-84-695-8363-0
440
978-84-695-8363-0
441
978-84-695-8363-0
442
978-84-695-8363-0
443
horaria para dedicar a la tutora en un contrato a tiempo completo que uno a tiempo parcial) y
en segundo lugar a las actitudes y aptitudes personales (no es lo mismo un profesional que
tenga formacin pedaggica en el terreno de la orientacin o la tutora y al mismo tiempo
desarrolle habilidades con las que mostrarse como alguien cercano y preocupado, que otro
que carezca de la formacin suficiente y del grado de empata necesario).
Hay una tutora oficial, una tutora real y hay una tutora obligatoria. () hay de
todo, hasta quien ni siquiera hace las tutoras!; () el que est full time en la
universidad le dedica ms tiempo que el que est a tiempo parcial, el que est a tiempo
parcial con la experiencia lo que intenta es que las dudas se resuelvan a final de la
clase () bsicamente como son profesionales que saben de un tema y vienen a
transmitirlo, el modelo es ms de transmisin. [E-2:5]
() son profesionales que estn en otros frentes y la pregunta es: habra que
sustituir a esos profesionales por gente a tiempo completo? Y para eso hay una
respuesta clara, no hay dinero para hacer eso!, pero a lo mejor esa es la solucin
(). [E-2:17]
El caso B, a pesar de esta revitalizacin que aporta a la tutora el Espacio Europeo de
Educacin Superior, sigue pensando que a nivel institucional la tutora est relegada a un
tercer o cuarto nivel en el mbito universitario, por detrs de la investigacin, la docencia e
inclusive de la gestin.
() (El EEES) no te digo que esto cale al 100% de los profesores, porque soy
consciente de que esto depende de cmo t te lo tomes, () [E-5: 95]
Yo pienso que la tutora y la docencia en el mbito universitario, tienen un papel
secundario, () no hay espacios diferentes al despacho del profesor para una tutora
colectiva, no estn diseados los centros con esa funcin, y cuando no hay una
funcionalidad en el espacio viene a significar que no se utiliza o que no hay conciencia
de su utilidad, () se dejan como a la libertad del docente y a la libertad del alumno
().En esta facultad tenemos un horario de tutora, () una franja horaria est libre
(), en esa hora todos los profesores estamos obligados a tener el 50% de las tutoras,
y entonces eso que ha hecho?, pues incrementar la demanda en tutora en este centro.
() Y si nadie lo agradece por qu es? (). [E-5: 92-94]
Discusin
A partir de los datos obtenidos en el procesamiento de la informacin de la categora
destinada a la utilizacin de la tutora universitaria por parte del profesorado perteneciente a
mbitos de conocimiento cientfico diferentes, llegamos a las siguientes conclusiones:
a) La tutora en el campo de las Ciencias Econmicas y Empresariales
Bajo el paradigma de este mbito de conocimiento se engloban titulaciones cuyos
planes de estudios recogen materias de ndole muy tcnico-profesionalizado, en gran parte
desarrolladas a partir de modelos didcticos transmisivos, y ello parece traducirse en un tipo
de demanda de Tutora ms acadmica y profesional que personal. En todo caso, las
demandas de Accin Tutorial se atienden en un primer trmino el propio aula, o bien a travs
del correo electrnico u otros medios tecnolgicos (plataformas o redes sociales) que
convierten al proceso de tutorizacin en algo menos personalizado que cuando el alumno
978-84-695-8363-0
444
asiste al despacho o se trabaja en el aula; solo ante dificultades de carcter ms tcnicoprctico, es cuando el alumno recurre a las tutoras presenciales en el despacho.
Las tutoras tradicionales en las que el alumnado acuda al despacho del profesor en la
ltima semana de clase para resolver dudas tericas relacionadas con el examen, deja paso a
un modelo en el que hay una distribucin de las tutoras y su contenido durante el curso y en
el que como decamos, el espacio se torna ms verstil y cambiante. No obstante, siguen
existiendo grandes disparidades en cuanto a la forma de afrontar y entender la tutora
universitaria en este campo cientfico, en gran medida condicionado por la dedicacin docente
del profesorado (el contrato a tiempo parcial por regla general parece ser que predispone a una
menor implicacin en el uso de la tutora) y por la falta de formacin en orientacin y tutora
en una titulacin en la que prima otro tipo de formacin ms tcnica y orientada a otro
mbitos del saber.
b) La tutora en el campo de las Ciencias Sociales, Humanas y Polticas
A raz de los datos obtenidos para este otro campo cientfico, se observa un trato
diametralmente opuesto en cuanto a la percepcin que se tiene de la tutora con respecto al
campo anterior. En este caso, pese a ser una demanda mayoritariamente transmitida
igualmente por el alumnado, tambin parece imponerse la convocatoria por parte del
profesorado para trabajar esta funcin; una funcin que a diferencia del mbito anterior, y
quizs por el carcter social que impregna a las titulaciones que se acogen bajo este campo
cientfico, s que recoge adems de la dimensin acadmica, otras dimensiones como pueden
ser la personal, la vocacional y la profesional, y siempre asociada a la vertiente prctica del
proceso de enseanza-aprendizaje.
Al igual que suceda en el apartado anterior, tambin se aprecia una cierta evolucin
en los modelos de accin tutorial en los que se trata de abandonar la directividad excesiva, y
en los que se vuelve verstil el espacio destinado a la tutora (en gran medida parece ser que
provocado por las nuevas directrices marcadas por el EEES), aunque el despacho sigue siendo
el lugar protagonista con el que se identifica la tutora.
Finalmente, pese a los grandes esfuerzos que se han hecho para dotar a la tutora de un
peso importante dentro del plano curricular de las titulaciones pertenecientes a este campo
cientfico, se deja entrever que sigue siendo una realidad que la tutora universitaria an se
mantiene en un tercer plano junto a la docencia y por detrs de investigacin y gestin.
As pues, como recapitulacin y a modo comparativo, destacaramos que en ambos
mbitos de conocimiento se apunta a la tutora como: una funcin ligada principalmente a la
docencia, an poco valorada entre el profesorado pese a las posibilidades ofrecidas por el
EEES (sobre todo de cara a la potenciacin de las tutoras grupales), en la que las nuevas
tecnologas van ganando terreno al espacio tradicional destinado a la tutora, y donde el papel
del alumnado parece ir retomando muy poco a poco las riendas de su implicacin en este
proceso, aunque sigue necesitando grandes dosis de orientacin, gua o apoyo.
Referencias
Bolvar, A. (1998). Desarrollo profesional del profesorado en secundaria: Itinerarios y ciclos
de vida. En J. Domingo y Colaboradores (Eds.), Formacin y desarrollo de los
978-84-695-8363-0
445
profesores de Educacin Secundaria en el marco curricular de la reforma (pp. 482488). Granada: FORCE y Grupo Editorial Universitario.
Boza, A. y Delgado, M. (2013). Proyecto Orient@ual: necesidades de orientacin
profesional en Huelva. Trabajo presentado en el IV Seminario de la Red
Interuniversitaria de Profesorado de Orientacin. Tenerife, Universidad de La Laguna.
Delgado, M. y Boza, A. (2012). La tutora universitaria narrada desde la experiencia.
Trabajo presentado en el I Congreso internacional e interuniversitario. Orientacin
educativa y profesional. Rol y retos de la orientacin en la universidad y en la
sociedad del siglo XXI. Mlaga, Universidad de Mlaga.
Delgado y M; Boza, A. (2012). Evaluacin de la tutora en la educacin superior. Estudio a
travs de la percepcin de los estudiantes universitarios. Trabajo presentado en el I
Congreso internacional e interuniversitario. Orientacin educativa y profesional. Rol y
retos de la orientacin en la universidad y en la sociedad del siglo XXI. Mlaga
Universidad de Mlaga.
Echeverra, B. Figuera, P. y Gallego, S. (1996). La orientacin universitaria: del sueo a la
realidad. Revista de orientacin y psicopedagoga, 7 (12), 207-220.
Fernndez, M. (1995). Ciclos de vida profesional de los profesores. Revista de Educacin,
306, 153-203.
Marn, V. (2005). La narrativa-biogrfica como estrategia para el estudio de la figura del
docente universitario. Campo Abierto, 28,129-142.
Martnez, M. y Crespo Fernndez, E. (2009). La tutora universitaria en el modelo de la
Convergencia Europea. En C. Gmez Lucas y S. Grau Company (Coords), Propuestas
de diseo, desarrollo e innovaciones curriculares y metodologa en el EEES (pp. 451466). Alicante: Universidad de Alicante.
Perandones, T. M. y Lled, A. (2009). La funcin del profesorado universitario como tutor.
Experiencias en el programa de accin tutorial en la Universidad de Alicante. En R.
Roig Vila (Dir.), Investigar desde un contexto educativo innovador (pp. 359-368).
Alcoy: Marfil.
Sharkey, J. (2004). Lives stories dont tell: exploring the untold in autobiographies.
Curriculum Inquiry, 34(4), 495-512.
978-84-695-8363-0
446
Resumen
El fracaso y abandono de los estudios superiores que se produce especialmente en los
primeros aos, sigue constituyendo a nivel mundial un grave problema por resolver, por lo
que los procesos de orientacin vocacional para la transicin desde las etapas previas que
faciliten la adaptacin a la universidad contina siendo un objetivo prioritario para
promover la retencin en el alumnado. En relacin a esta problemtica, se ha llevado a cabo
un anlisis de necesidades para determinar cmo viven los estudiantes este proceso, qu
expectativas tienen hacia la transicin, qu informacin manejan, cmo se plantean la toma
de decisiones y qu orientacin reciben para afrontar el trnsito. En la comunicacin se
presentan los primeros datos de un estudio realizado con una muestra de 619 estudiantes de
16 centros de enseanza secundaria de la provincia de Santa Cruz de Tenerife (Espaa) que
estaban preparando el acceso a la formacin universitaria.
Descriptores: Transicin a la educacin superior, Orientacin al alumnado, Expectativas
acadmicas, Adaptacin a la universidad.
Abstract
The failure and higher dropout occurs especially in the early years, remains a serious global
problem to be solved, so that the process of vocational guidance for the transition from the
previous stages to facilitate the adjustment to college continues to be a priority to promote
student retention. In relation to this problem, it has conducted a needs assessment to
determine how students live this process, what expectations have to transition, what
information is handled, how to raise the decision-making and what guidance they receive to
address traffic. The communication presents the first data from a study with a sample of 619
students from 16 secondary schools in the province of Santa Cruz de Tenerife (Spain) who
were preparing the access to university education.
Keywords: Transition to higher education, Student orientation, Academic expectations,
Adaptation to college.
978-84-695-8363-0
447
Introduccin
La implantacin del Espacio Europeo de Educacin Superior (EEES) se justifica por la
necesidad de corregir una serie de carencias y dificultades comunes, que muchos de los
sistemas educativos europeos venan reflejando en los informes publicados (cabe citar, a
modo de ejemplo, el informe Bricall en Espaa o el informe Dearing en el Reino Unido,
donde se recoge la necesidad de implantar mejoras significativas en el mbito educativo). El
conjunto de medidas colectivas para la mejora de la calidad han sido diversas, buscando con
ello una mejor adaptacin a los nuevos tiempos, a las nuevas realidades y a los problemas que
afectan a la educacin y que se deben combatir desde todos los frentes.
Adems de la creacin de un sistema de valoracin transferible del trabajo del
alumnado (sistema de crdito ECTS), la revisin y ajuste de los contenidos o la apuesta por
un sistema de acreditacin por competencias, uno de los objetivos prioritarios que se han
marcado los pases europeos es la reduccin de las tasas de fracaso/abandono escolar,
verdadera lacra de los sistemas educativos y uno de los principales enemigos de la calidad
educativa, por las repercusiones que tiene tanto para los individuos como para el sistema
educativo y para la sociedad en general (lvarez, Cabrera, Gonzlez y Bethencourt, 2006;
Gonzlez, lvarez, Cabrera y Bethencourt, 2007). Este no es un problema nuevo y en el
contexto europeo, trabajos como el de Yorke (1999) reflejan la importancia que el problema
del abandono tiene para las instituciones de educacin superior, donde en la dcada de los
noventa ya se registraban ndices muy altos en pases como Alemania (31%), Italia (50%) o
Blgica (27%).
Con el fin de hacer frente a esta situacin, se han empezado a potenciar y poner en
prctica distintos modelos y programas de orientacin y tutora, para conseguir mejorar los
procesos de transicin, acceso y adaptacin a la educacin superior (Santana y lvarez, 2002;
lvarez, Figuera y Torrado, 2011). En el contexto de la educacin superior, el Real Decreto
1393/2007 (corregido posteriormente por el Decreto 861/2010) que regula las enseanzas
universitarias incorpor el criterio de Orientacin del Estudiante. En el Art. 14: Acceso a
las enseanzas oficiales de Grado, punto 2 se seala: "las universidades dispondrn de
sistemas accesibles de informacin y procedimientos de acogida y orientacin de los
estudiantes de nuevo ingreso para facilitar su incorporacin a las enseanzas universitarias
correspondientes". Como derivacin de esta normativa, en los Sistemas de Garanta de
Calidad de los centros universitarios se contemplan distintas acciones de atencin y
orientacin al estudiante. Pero si se pretende que la adaptacin del alumnado que llega a la
formacin universitaria se produzca de manera efectiva, las acciones orientadoras deberan
tener un carcter preventivo, de modo que la transicin comience a prepararse desde las
etapas previas, desarrollando en el alumnado las competencias, las habilidades y los
conocimientos necesarios para afrontar este proceso y evitar que se produzcan desajustes. Lo
que reflejan los estudios realizados hasta el momento (Rodrguez, Fita y Torrado, 2003;
Torrado y col. 2010; Martn y col. 2010) es que en muchos casos los estudiantes no han sido
preparados para llevar a cabo la transicin, lo que hace que la insercin en los estudios
universitarios no siempre se logre y se sigan incrementando los porcentajes de cambio de
titulacin, prolongacin de los estudios o abandono de los mismos.
Para evitar estas situaciones tendran que acercarse las fronteras que separan el nivel
de la enseanza secundaria de la enseanza superior, estableciendo puentes de conexin
formativa asentados en una buena colaboracin que defina claramente el camino que deben
recorrer los estudiantes para incorporarse con xito a los nuevos estudios (muchos estudiantes
978-84-695-8363-0
448
el primer contacto que tienen con la universidad es cuando van a realizar la prueba de
selectividad). En la medida en que se d una buena sintona entre estos dos niveles
educativos, se realicen actividades de socializacin acadmica con tiempo suficiente para que
los estudiantes de bachillerato tomen conciencia de lo que supone cursar estudios superiores,
se les informe de las caractersticas y condiciones de la enseanza universitaria, etc., las
posibilidades de adaptacin sern mayores (Figuera, Dorio y Forner, 2003).
Mtodo
Los interrogantes bsicos que guiaron esta investigacin fueron: tienen los
estudiantes de secundaria en proceso de transicin a la universidad informacin acerca de las
caractersticas del nuevo modelo formativo?; qu tipo de orientacin reciben en relacin a
los estudios universitarios?;cmo afrontan el proceso de toma de decisiones a la hora de
decantarse por una titulacin universitaria?; cules son sus expectativas de xito respecto a
los estudios universitarios que van a comenzar? De manera ms especfica, se pretenda:
1. Analizar las expectativas de los estudiantes de etapas preuniversitarias hacia la
universidad.
2. Analizar la informacin adquirida por los estudiantes de etapas preuniversitarias acerca de
la universidad.
3. Analizar cmo llevan a cabo los procesos de toma de decisiones acadmicas los
estudiantes de etapas preuniversitarias.
A partir de un procedimiento de muestreo de tipo intencional, se trat de identificar a
estudiantes que, en el momento de la administracin de la prueba de recogida de datos, se
encontraran realizando estudios de segundo de bachillerato que fueran a transitar a la
educacin superior. Finalmente, se cont con la participacin de 619 estudiantes de 16
centros de formacin secundaria de la provincia de Santa Cruz de Tenerife, cuyas edades
estaban comprendidas entre los 16 y los 22 aos ( =17,54; Moda=17; Sd=0.774). En cuanto a
la distribucin por gnero, el 43,0% eran hombres y el 55,0% restante mujeres. En cuanto a la
modalidad de estudios de Bachillerato que cursaban los alumnos en el momento de la
administracin de la prueba, el 62,80% realizaba la especialidad de Ciencias y Tecnologa, el
32,80% Humanidades y Ciencias Sociales, y el 4,40% lo haca en Artes.
Tabla 1.
Caractersticas de la muestra participante
Gnero
Edad
Modalidad/Especialidad
cursado
de
Bachillerato
978-84-695-8363-0
449
4
3,5
3
2,5
2
1,5
1
0,5
0
3,67
3,24
978-84-695-8363-0
3,38
2,91
2,82
2,18
Titulaciones
Plan de estudios
450
Salidas
profesionales
Organizacin y
funcionamiento
Actividades
cultural o
deportivas
2,52
2,7
1,9
Vas de
participacin
estudiantil
Perfil acadmico
del estudiante
Derechos y
deberes
Becas y ayudas
Al analizar los datos vinculados a los procesos de eleccin y acceso a los estudios
universitarios, los resultados indicaron que los participantes contaban con una idea concisa y
clara acerca del tipo de formacin que queran cursar una vez finalizaran los estudios
preuniversitarios. Esta precisin en el proceso de toma de decisiones quedaba reflejada por
parte de los encuestados al indicar que desde siempre (p96) o a lo largo de la etapa de la
Educacin Secundaria Obligatoria (61,6%) haban tenido planificado cursar una titulacin de
formacin superior. Entre los motivos de eleccin de estudios universitarios, destacaron el
gusto por la carrera ( =4,25), las salidas profesionales ofrecidas por la titulacin ( =3,56) y
el tener las capacidades y habilidades para finalizar con xito los estudios ( =3,56). Tal y
como lo recogan algunos participantes se trataba de realizar una eleccin formativa adecuada
para estudiar lo que me gusta (p475) o sentirme realizado como persona (493).
Desde la perspectiva de los encuestados, los familiares ( =3,62) y los amigos
( =2,98) se configuraban como agentes facilitadores de apoyo y ayuda en este proceso de
toma de decisiones, aunque como indicaban algunos estudiantes, la eleccin de los estudios
978-84-695-8363-0
451
finalmente la realizaban porque ha sido una decisin ma (p310) o por decisin personal
(p32).
Conclusiones
En general, una de las principales conclusiones que se puede subrayar de los
resultados analizados es que, desde la perspectiva de los encuestados, se deben mejorar
algunos aspectos de carcter informativo acerca de la universidad, con la intencin de mejorar
los procesos de transicin, acceso y adaptacin a la enseanza universitaria. As, queda
nuevamente patente la escasa vinculacin entre las etapas preuniversitarias y la enseanza
superior, requiriendo una colaboracin entre ambas instancias, para hacer posible una
transicin y un acceso al contexto formativo adecuado. En esta lnea, habra que implantar
medidas educativas de carcter preventivo que, desde etapas educativas previas a la educacin
superior, ofrezcan informacin y conocimiento acerca de la universidad, doten al estudiante
de capacidades y habilidades para tener xito acadmico en la enseanza superior, y
favorezcan experiencias en las que los estudiantes puedan conocer de primera mano la
realidad y el sentir del estudiante universitario.
Concretamente, entre las conclusiones del estudio, cabra resaltar que:
-
Tomando como referencia estos datos, y con la intencin de mejorar los procesos de
transicin y adaptacin a la enseanza universitaria por parte del estudiantado, se deberan
proponer medidas educativas y orientadoras adecuadas para establecer relaciones y reforzar
978-84-695-8363-0
452
978-84-695-8363-0
453
Resumen
La funcin de apoyo que ejercen las acciones de orientacin profesional, que se organizan en
las instituciones educativas, en relacin a los procesos de toma de decisiones y la
construccin del proyecto vital, han de prolongarse y reiterarse en el tiempo para atender
nuevas demandas de la poblacin adulta, a travs de los servicios de empleo, con el fin de
integrar la orientacin a lo largo de la vida como una de las claves para mejorar su
empleabilidad y calidad de vida. Los objetivos del estudio descriptivo que presentamos son
identificar las necesidades de orientacin percibidas en la edad adulta y analizar si existen
diferencias significativas en relacin al gnero de las personas consultadas. La muestra del
estudio, realizado en el ao 2012, est conformada por 614 sujetos de los cuales 50,5% son
mujeres y 49,2% hombres. Los datos se recabaron a travs de un cuestionario diseado ad
hoc por investigadoras del proyecto interuniversitario ORIEM que se ha llevado a cabo en
cinco comunidades autnomas (Andaluca, Aragn, Canarias, Castilla-Len y Galicia). Los
resultados obtenidos apuntan un nivel intermedio de necesidades en las dimensiones:
autoexploracin; formacin; toma de decisiones; bsqueda de empleo; gestin y puesta en
prctica del proyecto. Hay diferencias significativas en relacin con la variable gnero y
stas aumentan si combinamos los anlisis con otras caractersticas personales de los sujetos
del estudio.
Descriptores: Necesidades de orientacin,
oportunidades, estudio descriptivo.
orientacin
profesional,
igualdad
de
Abstract
The support function exerted by vocational guidance, which are organized in educational
institutions, in relation to decision-making processes and vital project construction, have
extended and repeated in time to meet new demands of adults population, through
employment services, in order to integrate the guidance throughout life as one of the keys to
improving their employability and quality of life. The objectives of the present descriptive
study are to identify the needs of perceived orientation in adulthood and examine whether
there are significant differences in relation to gender of respondents. The sample of the study,
conducted in 2012, is composed of 614 subjects, of which 50.5% are women and 49.2% men.
25
Esta propuesta est financiada a travs del proyecto del Plan Nacional 2010, del Ministerio de Ciencia e
Innovacin, titulado La orientacin del proyecto vital y profesional en la edad adulta: anlisis de necesidades,
valoracin de servicios para el empleo e identificacin de buenas prcticas (Referencia: EDU2010-21873-C0301).
978-84-695-8363-0
454
The data were collected through a questionnaire designed ad hoc by researchers ORIEM
interuniversity project that has been carried out in five regions (Andaluca, Aragn,
Canarias, Castilla-Len and Galicia). The findings suggest an intermediate level of needs in
dimensions: self-exploration, training, decision-making, job search, management and project
implementation. There are significant differences in relation to the gender variable and
increase if we combine these analyses with other personal characteristics of the study
subjects.
Keywords: Guidances needs, vocational guidance, equal opportunities, descriptive study.
Introduccin
El mercado de trabajo en Espaa est, actualmente, sometido a constantes cambios que
ponen de manifiesto la conveniencia de atender las necesidades de orientacin profesional de
la poblacin adulta. Adems, en la coyuntura de crisis econmica que vivimos, el problema se
agudiza al ser ms las personas que ven truncados sus proyectos vitales (personales y
profesionales) por culpa de variados factores como la falta de recursos econmicos, el
desempleo, el empleo precario etc.
Las necesidades que surgen de esta situacin hacen que las personas sientan a menudo
una desorientacin personal, un desplazamiento, que genera una demanda de ayuda. As pues
las personas adultas se plantean la necesidad de acceder a servicios de orientacin profesional
que les permitan conocer las prospectivas de los sectores en los que trabajan y las
formaciones ms adecuadas a los perfiles demandados.
La orientacin profesional en Espaa entendida como el apoyo proactivo a los
individuos se est convirtiendo en eje central de las polticas activas de empleo y como punto
base de las evaluaciones de necesidades desde las que planificar acciones de formacin y
evaluar resultados. Esta definicin se ha integrado en nuestro contexto pero, a pesar de ello,
todava son pocos los estudios que afrontan la tarea de identificar y delimitar las necesidades
de las personas adultas en relacin con su desarrollo profesional y vital (Garca del Dujo y
Martn, 2004; Aneas y Donoso, 2008; De la Fuente y Gonzlez-Castro, 2009; Guerrero, 2005;
etc.) y adems estas investigaciones se han centrado en colectivos concretos (inmigrantes,
estudiantes universitarios, personas con discapacidad, etc.) o en aspectos especficos
(insercin laboral, valores laborales, etc.). Carecemos, por tanto, de investigaciones que
aborden, de forma sistemtica y generalizada, esta cuestin de manera que sea posible derivar
consecuencias para la intervencin. Y ello reviste gran importancia, pues, desde diversas
iniciativas legales, se ha potenciado la proliferacin de servicios dirigidos a este grupo,
soslayando la importancia de conocer previamente las necesidades sobre las que deben
intervenir, as como los mecanismos ms adecuados para ello. Por otra parte, el avance terico
experimentado en otros pases no siempre ha sido integrado en la prctica profesional, siendo
escasos los servicios que adoptan una perspectiva integral enmarcada en el proyecto
profesional-vital como contexto en el que desarrollar procesos como la insercin laboral.
Sintetizando las aportaciones de los estudios, en nuestro pas, con trabajadores y
trabajadoras que estn en situacin de ocupados/as o desempleados/as se pone de manifiesto
que este colectivo presenta tres necesidades muy importantes (Garca del Dujo y Martn,
2004; Guerrero, 2005; Padilla, 2001; Surez, 2004; etc.): (a) mantener la empleabilidad,
978-84-695-8363-0
455
permanecer en el mercado de trabajo; (b) una formacin continua a lo largo de la vida, que le
permita mantener dicha empleabilidad; y (c) la necesidad de posicionarse en un lugar mejor
dentro del mercado, y a su vez, de articular las diversas necesidades vitales y profesional, es
decir, de desarrollar y gestionar su proyecto profesional-vital.
Los objetivos del estudio descriptivo que presentamos son identificar las necesidades
de orientacin percibidas por una muestra de hombres y mujeres, residentes en la Comunidad
Autnoma de Galicia, y analizar si existen diferencias significativas en relacin al gnero de
las personas consultadas.
Mtodo
La muestra del estudio, realizado en el ao 2012, est conformada por 614 sujetos de
los cuales 50,5% son mujeres y 49,2% hombres que, estando o no en situacin de desempleo,
son usuarios/as de los servicios pblicos de orientacin. El muestreo se realiz por cuotas,
establecindose estratos que representan las caractersticas diferenciales de la poblacin en
cuanto a rasgos sociodemogrficos (gnero, edad, situacin laboral, nivel de cualificacin y
procedencia) respetando unos porcentajes previamente establecidos a la hora de delimitar las
cuotas en cada estrato.
Los datos se recabaron a travs de un cuestionario diseado ad hoc por investigadoras
del proyecto interuniversitario ORIEM que se ha llevado a cabo en cinco comunidades
autnomas (Andaluca, Aragn, Canarias, Castilla-Len y Galicia). El instrumento de
recogida de informacin o inventario de necesidades de orientacin en el desarrollo
profesional se elabor, por el equipo de investigacin, tomando como punto de partida
instrumentos ya existentes:
- El Inventario de Preocupaciones en el desarrollo profesional Adulto - IPA (adaptacin al
castellano del ACCI de Super, Thompson y Lindeman, 1988).
- El Cuestionario de Desarrollo Profesional, Valores de Trabajo y Gnero (Trabajadores/as)
de Snchez (Coord.), Fernndez, Lozano, Malik, Manzano y Oliveros (2004).
- El Salience Inventory (SI) y la Values Scales (VS) (Nevill & Super, 1986a; 1986b).
- El Cuestionario sobre necesidades de orientacin de los universitarios (Snchez, 1999).
- Cuestionario sobre la Madurez Vocacional (Lucas, 1999).
Las necesidades de orientacin se presentan, en el cuestionario de recogida de datos,
como una serie de afirmaciones a fin de que, las personas consultadas, manifestasen su grado
de acuerdo o desacuerdo con las mismas. El valor 0 indica que la persona esta en total
desacuerdo y el valor 5 indica un total acuerdo. Las necesidades, por otra parte, se han
agrupado en los siguientes bloques: necesidades para la autoexploracin, necesidades de
formacin, necesidades para la toma de decisiones y la planificacin personal y profesional,
necesidades para la bsqueda de empleo y necesidades para la gestin y puesta en prctica del
proyecto.
El grado de estabilidad y consistencia del inventario de necesidades es alto, tal como
expresa su coeficiente de fiabilidad ( = 0. 945).
978-84-695-8363-0
456
Resultados
Los resultados del anlisis descriptivo bsico de los tems incluidos en el inventario
nos permiten deducir que las valoraciones emitidas denotan un nivel intermedio/alto en todas
las capacidades y competencias contempladas. La media de los elementos se sita en 3,707.
Podra considerarse, por tanto, que no manifiestan un alto grado de necesidad de recibir
orientacin personal y profesional. No obstante, conviene destacar que las puntuaciones
siempre se mueven en la horquilla de 2,96 y 4,11 lo que vendra a indicar que ninguna de las
competencias consideradas se ha desarrollado plenamente.
El anlisis por separado de cada una de las cinco subdimensiones estudiadas nos
seala que las mayores necesidades de orientacin de las personas consultadas se dan en las
necesidades de formacin, con una media de 3,45 en la subdimensin, mientras las menores
necesidades de orientacin se centraran en las de exploracin donde la media es de 3,8. Un
anlisis pormenorizado de cada una de las dimensiones nos revela lo siguiente:
En la dimensin de exploracin, conformada por cinco tems, la competencia menos
desarrollada est en relacin con la propia exploracin y el conocimiento til sobre uno/a
mismo/a y es por tanto la que se debera trabajar ms desde la orientacin. Como tambin se
puede ver en la tabla 1, las menores necesidades de orientacin en esta subdimensin se
daran en relacin al autoconcepto de las personas consultadas.
Tabla 1
Medias y desviaciones tpicas de las respuestas a las distintas capacidades y competencias que
delimitan las necesidades de orientacin de las personas consultadas en la subdimensin de
exploracin
N
Necesidades para la autoexploracin
Tengo informacin til sobre mi mismo para elaborar mi itinerario
605
Tengo claros los puestos trabajo que me interesan
608
Tengo clara la direccin de mi futuro profesional
606
Se establecer mis objetivos profesionales
605
Tengo buen autoconcepto
608
Media
Desv. tpica
3,63
3,98
3,67
3,75
4,00
1,067
1,081
1,153
1,042
,992
N
606
605
605
Media
Desv. tpica
3,50
3,41
3,46
1,167
1,199
1,165
978-84-695-8363-0
457
Media
Desv.
tpica
1,029
1,087
1,012
1,142
1,125
1,019
Media
Desv. tpica
4,11
3,93
2,96
1,002
1,153
1,439
978-84-695-8363-0
458
Tabla 5
Medias y desviaciones tpicas de las respuestas a las distintas capacidades y competencias que
delimitan las necesidades de orientacin de las personas consultadas en la subdimensin de gestin y
puesta en prctica del proyecto
N
Necesidades para la gestin y puesta en prctica del proyecto
Se afrontar la incertidumbre propia del mercado laboral
606
Soy capaz de conseguir mis objetivos profesionales
605
Se sacar el mximo partido de mis puntos fuertes en mi vida profesional
604
Afronto de forma adecuada mis fracasos y mis xitos
605
Soy capaz de detectar mis nuevas necesidades para mejorar mi vida
598
profesional
Soy capaz de encontrar el modo de conciliar satisfactoriamente mi vida
606
familiar y profesional
Cuando surgen oportunidades interesantes, suelo darme cuenta y
607
aprovecharlas
Media
Desv.
tpica
3,70
3,31
3,69
3,70
3,69
1,064
1,073
1,016
1,079
1,039
3,77
1,193
3,75
1,070
Las respuestas obtenidas representan por igual las opiniones de mujeres y hombres. En
relacin al anlisis diferencial por gnero, realizado a travs de la t de Student, se han
obtenido diferencias significativas en algunas de las afirmaciones referidas a distintas
subdimensiones de las estudiadas, en concreto en algunas afirmaciones referidas a la
autoexploracin, la toma de decisiones y la planificacin personal y profesional, la bsqueda
de empleo y la gestin y puesta en prctica del proyecto.
En la primera subdimensin referida a las necesidades de orientacin para la
autoexploracin profesional encontramos diferencias significativas en los siguientes casos:
-
En relacin a Tener claros los puestos de trabajo de inters tambin se dan diferencias
significativas en funcin del gnero, siendo las mujeres ( = 4,11) las que nuevamente
presentaran menos necesidades de orientacin que los varones ( =3,86)
t (580,855) =2,837, p = 0005
978-84-695-8363-0
459
En relacin a Ser competente para tomar decisiones son los hombres ( = 3,59) los
que presentan ms necesidades de orientacin para mejorar su competencia para tomar
decisiones frente a las mujeres de la muestra consultada ( = 3,82).
t (603) = 2,515, p = 0012
Las mujeres presentan menos necesidades de orientacin ( = 4,23) que los hombres
consultados ( =4) en relacin al Conocimiento de tcnicas de bsqueda de empleo
t (601) = 2,933, p = 0003
Debemos tener en cuenta que, los programas de orientacin para el empleo llevan a
cabo actuaciones para paliar las necesidades de orientacin que presentan los sujetos que
reclaman sus servicios bien por estar en situacin de desempleo o bien por querer mejorar su
situacin laboral o profesional.
Las necesidades de orientacin se pueden agrupar en distintas subdimensiones a la
hora de planificar las acciones que las usuarias/os de los servicios demandan. En el estudio
realizado dichas necesidades de orientacin se agrupan en cinco subdimensiones: exploracin
y conocimiento de uno mismo/a, formacin para la consecucin de un empleo o para la
mejora del empleo actual, toma de decisiones y planificacin de los itinerarios de insercin
laboral y/o profesional, bsqueda activa y autnoma de oportunidades de empleo a travs de
los distintos recursos disponibles y aprovechando las oportunidades que se presenten y, por
ltimo, puesta en prctica del proyecto personal y profesional elaborado.
Como otros estudios anteriores ya sealaban (Padilla, 2001; Guerrero, 2005) las
mayores necesidades de orientacin de las personas desempleadas, o en mejora de empleo,
estn relacionadas con la mejora de las redes de contactos que faciliten el acceso al empleo,
con ser capaz de conseguir los objetivos profesionales que se han marcado en el proyecto
profesional, con tener mayor formacin especfica para encontrar o mejorar en el empleo y
con obtener ms y mejor informacin sobre las alternativas de formacin que ofrece el
entorno.
Por ltimo, tambin debemos hacer hincapi, como tambin haba destacado con
anterioridad Snchez (2004), en que existen diferencias significativas en las necesidades de
978-84-695-8363-0
460
orientacin que presentan hombres y mujeres por lo que los servicios de orientacin para el
empleo debern tener en consideracin este dato a la hora de individualizar los programas y
acciones que llevan a cabo y a la hora de planificar las evaluaciones de necesidades previas al
diseo, con la usuaria o usuario del servicio, de un itinerario personalizado de insercin.
Referencias
Aneas, A. y Donoso, T. (2008). Estudio sobre los procesos de integracin laboral de los
inmigrantes. Revista Espaola de Orientacin y Psicopedagoga, 19, 51-60.
De la Fuente, R. y Gonzlez-Castro, J.L. (2009). Empleo, formacin e insercin de colectivos
en riesgo de exclusin. Un reto social y econmico para la empresa receptora. Bordn,
61, 33-45.
Garca del Dujo, A. y Martn, V. (2004). Perfil laboral y necesidades de formacin en
personas adultas en paro (30-45 aos): un estudio emprico. Revista de Educacin,
233, 297-318.
Guerrero, C. (2005). Orientacin de trabajadores y trabajadoras ocupados: el caso de la
Regin
de
Murcia.
Disponible
en:
http://tecnologiaedu.us.es/formaytrabajo/Documentos/guerrero.pdf. Fecha de consulta:
29/01/2010.
Lucas, S. (1999). Programa de orientacin para el desarrollo de la madurez vocacional en
Educacin Secundaria. Tesis doctoral. Facultad de Educacin. Universidad de
Valladolid.
Nevill, D. D., y Super, D. E. (1986a). The salience inventory: theory, application, and
research: Manual. Palo Alto, CA: Consulting Psychologists.
Nevill, D. D., y Super, D. E. (1986b). The values scale: theory, application, and research:
manual. Palo Alto, CA: Consulting Psychologists.
Padilla, M. (2004). Procedimientos para la evaluacin de las necesidades socioeducativas de
las personas adultas. En E. L. Lucio-Villegas Ramos (Coord.), Investigacin y
prctica en la educacin de personas adultas (pp. 137-170). Valencia: Nau Llibres.
Snchez Garca, M. F. (2004). Orientacin laboral para la diversidad y el cambio. Madrid:
Sanz y Torres.
Snchez, M. F. (1999). Necesidades y servicios de orientacin universitaria en la Comunidad
de Madrid. Madrid: UNED.
Super, D.E., Thompson, A.S. y Lindeman, R.H. (1988). Adult career concerns inventory. Palo
Alto: Consulting Psych. Press.
978-84-695-8363-0
461
Resumen
Esta comunicacin se basa en una investigacin sobre el seguimiento y evaluacin durante 3
cursos consecutivos de las estructuras y modelos institucionales de orientacin implantados
en 9 CCAA. Se trata de identificar los fundamentos de los servicios de orientacin as como
los resultados alcanzados relativos a la eficiencia y la equidad. Este trabajo analiza los datos
referidos a la etapa de educacin secundaria relativos a la atencin a la diversidad mediante
un cuestionario aplicado a una muestra de profesorado tutor, orientadores/as y directores/as
en Galicia. Esta muestra procede de 32 institutos de educacin secundaria de las cuatro
provincias gallegas. En cada centro se encuest al orientador/a y al director/a y a una
muestra de profesores tutores, hasta un total de 171 personas encuestadas. El cuestionario,
adaptado a cada grupo informantes y a las peculiaridades del sistema de orientacin
gallego, preguntaba sobre las expectativas previstas y las necesidades alcanzadas.
Descriptores: Atencin a la diversidad, servicios de orientacin, educacin secundaria
obligatoria, calidad de la educacin, equidad de la educacin.
Abstract
This paper is based on research about the evaluation of school counseling services and those
institutional models implemented in nine of Spains Autonomous Communities. The outcome
is to identify the bases of the services made available and the results in terms of quality and
equity in education obtained by those services. Specifically this document analyzes the data
related to secondary education in the area of special needs attention collected by a survey of
171 educators from 32 secondary schools in Galicia. The questionnaire, adapted for each
informant group, analyzes the opinions of a sample of teachers, principals, and guidance
counselors, about their satisfaction with special needs support services in Galicia.
Keywords: Attention to diversity, counseling services, compulsory secondary education,
quality of education, equity in education.
978-84-695-8363-0
462
Introduccin
En Galicia, el sistema de orientacin que opera en la educacin secundaria obligatoria
es multinivel: tutora, departamento de orientacin y Equipo de Orientacin Especfico. En los
tres niveles la atencin a la diversidad es una de sus reas de actuacin. Al profesorado tutor
se le atribuyen funciones de deteccin de dificultades de aprendizaje, de coordinacin y
seguimiento de las medidas de atencin a la diversidad, de comunicacin y colaboracin con
la familia y de intermediacin en la solicitud de colaboracin y apoyo de los especialistas del
departamento de orientacin. La normativa atribuye al departamento de orientacin un papel
relevante en el proceso de atencin a la diversidad. Ocupndose de la evaluacin
psicopedaggica, la elaboracin y seguimiento de propuestas de intervencin, el
asesoramiento a la comunidad educativa sobre las medidas y recursos para la atencin a la
diversidad y la elaboracin y puesta en prctica de medidas para la prevencin de dificultades
de aprendizaje.
La incorporacin al departamento de orientacin de los maestros especialistas en
Pedagoga Teraputica (PT) y en Audicin y Lenguaje (AyL) refuerza el papel de ste en la
atencin a las necesidades educativas especficas. Estos profesionales pueden realizar su
trabajo en la educacin secundaria (RD 1594/2011). El especialista en PT colabora en el
proceso de atencin a las necesidades especficas de apoyo educativo cuando se relacionan
con las dificultades de aprendizaje y de adaptacin, con retrasos en el aprendizaje, con
necesidades especficas derivadas de algn tipo de diversidad funcional y con rasgos
disociales. Por su parte, el profesorado de AL asume la atencin a las dificultades que afectan
al mbito comunicativo, dificultades o retrasos en el lenguaje en sus distintas dimensiones
(articulacin, produccin, organizacin, etc). A nivel funcional, los servicios de orientacin
externos, denominados Equipos de Orientacin Especficos, asumen cometidos de diseo y
promocin de programas preventivos y de asesoramiento a los departamentos de orientacin
en los mbitos de atencin a la diversidad en los que estn especializados: sobredotacin
intelectual, discapacidades sensoriales, discapacidad motora, trastornos generalizados del
desarrollo y trastornos de la conducta.
Los resultados que se presentan en esta comunicacin proceden de la investigacin
Seguimiento de la evolucin de los distintos modelos institucionales de orientacin en las
Comunidades Autnomas espaolas, anlisis de sus fundamentos y evolucin de su eficiencia
en el apoyo a la calidad y a la equidad realizada en nueve Comunidades Autnomas
(Andaluca, Canarias, Cantabria, Castilla la Mancha, Catalua, Galicia, Madrid, Navarra y
Pas Vasco).
En la comunicacin se analizan datos parciales relativos a uno de los objetivos de la
investigacin: la valoracin de los resultados del modelo institucional de orientacin gallego
por parte de los orientadores y orientadoras, del profesorado tutor y de la direccin de los
centros. Concretamente, se aborda la satisfaccin con el funcionamiento de los servicios de
orientacin en el mbito de atencin a la diversidad en la Educacin Secundaria Obligatoria.
Mtodo
Seleccin y caractersticas de la muestra
La poblacin est constituida por los orientadores, directores de centro y profesorado
tutor de Educacin Secundaria Obligatoria de Galicia. La unidad primaria de muestreo fue el
978-84-695-8363-0
463
Orientadores/as
%
N
40,6
13
15,6
5
12,5
4
31,3
10
100,0
32
%
38,7
16,1
12,9
32,3
100,0
Directores/as
N
12
5
4
10
31
39,3
15,9
11,2
33,6
100
Tutores/as
%
N
42
17
12
36
107
978-84-695-8363-0
464
Nada/Casi
nada
N
%
Valoracin orientadores/as
Orientador/a
Especialistas de
2
6,3
apoyo del DO
EOEs
14 45,2
Valoracin profesorado tutor
Orientador/a
4
3,8
Especialistas de
6
6,2
apoyo del DO
EOEs
14
20,6
Valoracin directores/as
Orientador/a
1
3,2
Especialistas de
2
6,4
apoyo del DO
EOEs
12
40
Poco/
Algo
Bastante
/Mucho
N
%
Me
3
6
9,4
18,7
29
24
91,6
75
5,28
4,88
,634
1,070
5
5
32
32
12
38,6
16,2
2,81
1,493
31
17
26
16,4
26,8
83
65
79,8
67
4,99 ,990
4,77 1,159
5
5
104
97
24
35,3
30
44,1
3,99 1,569
68
6
8
19,4
25,8
24
21
77,4
67,8
5,06 1,063
4,74 1.125
5
5
31
31
12
40
19,3
3,03 1,542
30
978-84-695-8363-0
465
Tabla 3
Obstculos que limitan la contribucin de los EOEs a la atencin a la diversidad
Obstculos en el apoyo
de los EOEs
Insuficiente tiempo por
tener que atender a
muchos centros
Falta de formacin
especializada de sus
miembros
Escasa colaboracin
entre los EOE y los DO
Escaso nmero de
especialistas
Directores/as.
Me
N
3,90 1,709
Orientadores/as
Me
N
Profesorado tutor
Me N
30
4,68 1,739
31
3,93 1,936
70
2,96 1,401
28
3,02 1,731 3
64
3,57 1,736
4,33 1,668
3,10 1,496
4,47 1,756
3
5
29
30
3,25 1,842 3 71
3,54 4 1,799 68
4
5
30
30
Ninguna/ Casi
ninguna
N
%
1
3,1
1
1
1
3,2
Poca /Alguna
Bast/Mucha
N
N
18
44
12
%
56,3
42,8
39,6
N
13
58
18
%
40,6
56,3
58,1
32
103
31
Me
4,34
4,59
4,52
1,035
,933
1,061
4
4
4
Insuficiente
N
%
19
61,3
48
45,7
12
40
Suficiente
N
%
12
38,7
57
54,3
18
60
N
31
105
30
3,42
3.82
3,93
Me
,923
1,125
1,081
3,00
4,00
4,00
978-84-695-8363-0
466
Directores/as.
Me
3,42 1,929
3
4,58 1,676
4,75 1,712
5,45
,688
N
12
Orientadores/as
Me N
4,37 1,422 5
19
Tutores/as
4,49 1,701
Me
5
N
45
12
1,202
19
4,75 1,341
46
5,50
12
4,42
1,667
19
4,71 1,349
42
12
4,94
1,211
19
46
978-84-695-8363-0
467
26
Los datos sobre la composicin de los EOEs proceden de la informacin proporcionada en octubre de 2012
mediante comunicacin personal por los propios servicios.
978-84-695-8363-0
468
978-84-695-8363-0
469
Resumen
La comunicacin que se presenta forma parte de una investigacin sobre el anlisis de la
construccin biogrfica de la labor de Orientacin y del rol de Asesor/a a travs de historias
de vida de dos profesionales de la misma, en la etapa de la Educacin Primaria y
concretamente en la Comunidad de Galicia. Se exponen los resultados relativos a uno de los
objetivos del estudio visualizar las experiencias de las orientadoras rememorando aspectos
importantes de su labor como orientadoras y de sus funciones de asesoramiento. La
investigacin pretende ser el vehculo por el que se oiga la voz de las protagonistas en la
construccin de su rol de orientadoras y asesoras a travs de historias de vida. El estudio
muestra como el tema de la labor de asesoramiento es percibido por las entrevistadas como
que docentes y profesionales de la orientacin se necesitan mutuamente. Basada en una
prctica fundamentalmente colaborativa.
Descriptores: Asesoramiento, orientacin, atencin a la diversidad, historias de vida.
Abstract
The communication presented belongs to an investigation about the analysis of biographical
construction of the work of school consultation and the role of Advisor through life stories of
two professionals of the same, at the stage of primary education and specifically in the
Community of Galicia. Is based the results relating to some of the objectives of the study
"Display guiding experiences of remembering important aspects of his work as a guiding and
counselling functions." The research aims to be the vehicle by which voice to the protagonists
in the construction of its guiding and advisory role. The study shows who the topic of the work
of school consultation is perceived by the interviewed ones like that teachers and
professionals of the orientation need mutually. Based on a fundamentally colaborative
practice.
Keywords: School orientation, counselling, attention to diversity, life stories.
Introduccin
La LOGSE (1990) supuso un progreso considerable en el desarrollo de la Orientacin.
En el estado espaol los pasos que se venan dando en pro de un servicio de orientacin para
el conjunto del sistema educativo alcanzan una verdadera dimensin con la LOGSE, la cual se
refiere con claridad a la funcin de la orientacin reconociendo el derecho de todo el
alumnado a recibir una orientacin educativa y profesional. Entre otros avances la aplicacin
978-84-695-8363-0
470
978-84-695-8363-0
471
978-84-695-8363-0
472
gradual (Flick, 2004), ya que este es un proceso de adaptacin constante a los datos y de ir
tomando decisiones metodolgicas a lo largo del estudio.
Participantes
Las participantes del estudio son dos orientadoras de Educacin Primaria que llevan a
cabo su labor en la Comunidad Autnoma de Galicia. En este estudio para la seleccin de los
informantes ha sido utilizada la seleccin por criterios segn Patton (1990, pp. 169-181) que
recoge Flick (2004), aplicando inicialmente el criterio de conveniencia. Una vez que se
estableci el primer contacto con las informantes, se les explicaron los propsitos del trabajo.
Mediante un acuerdo verbal (Stake, 1998, p.59) se les comentaron las condiciones en las que
la investigacin se iba a realizar. Ya que tal y como consideran Bolvar, Domingo y
Fernndez (2001, p.162) de ese primer momento y del grado de empata conseguido va a
depender, largamente, la propia calidad y profundidad del relato obtenido.
Tcnica de recogida de datos
En el proceso de investigacin el procedimiento o tcnica fundamental utilizada para la
recogida de datos ha sido la entrevista biogrfica. Para Bolvar, Domingo y Fernndez (2001)
la entrevista biogrfica consiste en reflexionar y rememorar episodios de la vida, donde la
persona cuenta cosas a propsito de su biografa, en el marco de un intercambio abierto
(introspeccin y dilogo), que permita profundizar en su vida por las preguntas y escucha
activa del entrevistador, dando como resultado una cierta coproduccin. La recogida de la
informacin se ha realizado mediante un ciclo sucesivo de entrevistas biogrficas en
construccin recurrente, en distintos tiempos (tres entrevistas y una ltima reunin).
Entendiendo sta como una sola entrevista en profundidad, en cada tiempo se ha centrado en
un foco especfico de inters, a la vez que se iba reconstruyendo el anterior. Tal y como seala
Bolvar, Domingo y Fernndez (2001, p.168) se ha ido profundizado en el mismo tema: la
historia profesional de sus vidas.
Anlisis de datos
El anlisis de datos en este trabajo se ha realizado mediante la tcnica de interpretacin
directa de Stake (1998): los investigadores consiguen las significaciones mediante las
interpretacin directa de los ejemplos individuales, y posteriormente por la suma de los
ejemplos hasta poder extraer caractersticas comunes a un grupo (Stake, 1998; p.69). Esta
tcnica es una estrategia de anlisis fundamentalmente descriptiva, estando muy cercana a los
datos brutos, trabaja con interpretacin de primer nivel o de carcter descriptivo.
Se ha trabajado de forma inductiva a partir de las transcripciones, destacando los temas
que plantean las participantes, buscando en ellas temas prefigurados y aadiendo cualquier
nota que sea necesaria para contextualizar el significado (Simons, 2011, p. 190).
Como primer paso de cada pregunta se ha extrado una sntesis temtica de su contenido
y unos Memos donde se resume y se hace una primera interpretacin del contenido de cada
cuestin. Sirviendo este procedimiento para elaborar una comprensin ms profunda del
texto. Posteriormente una vez analizada y sintetizada la informacin, el siguiente paso en el
procedimiento fue un anlisis de codificacin temtica (Flick, 2004, p.201). De la
codificacin temtica han surgido los temas. Posteriormente una vez recogidos y analizados
los datos a travs de la codificacin, la redaccin de memorandos (Memos), los resmenes, y
978-84-695-8363-0
473
la organizacin de los datos por temas (Simons, 2011). El siguiente paso, siguiendo a Bolvar,
Domingo y Fernndez (2001, p.203), consisti en un doble anlisis; uno vertical/historias de
vida y otro horizontal/anlisis comparativo. Se ha pretendido encontrar, entre las narrativas
acumuladas, relaciones de vinculacin, proximidad y /o causalidad entre las partes del relato.
Criterios de credibilidad
Se aplicaron; la triangulacin mediante la bsqueda del consenso entre el investigador y
las informantes, la fiabilidad y la credibilidad y la validez interna del mtodo biogrfico.
En primer lugar, para llevar a cabo la triangulacin del mtodo se ha seguido lo
planteado en Bolvar, Domingo y Fernndez (2001, p.137) y se ha aplicado mediante
bsqueda del consenso entre investigador e informantes. Esta es una triangulacin basada en
el dialogo de los propios narradores y el investigador, negociando y consensuando entre ellos
los resultados a nivel individual y grupal. Por ello se devolvieron todas las interpretaciones,
para ver si se ajustan a lo que quisieron decir y en el tono y forma que lo hicieron.
Con respecto a la fiabilidad del procedimiento (Flick, 2004) en la investigacin
cualitativa, aumentar en la medida en que todos los pasos que se lleven a cabo estn
convenientemente documentados, quedando claro cules son las declaraciones de las
investigadas y cules las de la investigadora. Dentro del mtodo biogrfico ste tiene una
credibilidad y validez interna propia. Para enfocar la validez se aplicaron dos procedimientos
(Flick, 2004). Primero la validacin de la informacin por parte de los sujetos investigados,
devolvindoseles la trascripcin literal de la entrevista as como el informe biogrfico que se
realiz a partir de ellas, generando as la posibilidad de revisin, de corregir, eliminar o
matizar el contenido del informe final (Garca, Calvo y Susinos, 2008, p.23). Por otro lado las
interpretaciones del anlisis tienen un enfoque ms descriptivo.
En la investigacin biogrfico-narrativa, los criterios de validez y confiabilidad viene
dados por la propia credibilidad y coherencia interna de las historias; partiendo de que el
principal criterio de verdad, siendo la propia implicacin de los participantes, su honestidad
personal, y el inters mutuo en llegar a conclusiones consensuadas (Bolvar, Domingo y
Fernndez, 2001).
Resultados
Se presentan los resultados de la investigacin en relacin al objetivo visualizar las
experiencias de las orientadoras rememorando aspectos importantes de su labor como
orientadoras y de sus funciones de asesoramiento. Se expone un breve anlisis de los
testimonios utilizados por las dos informantes, centrndonos en los resultados obtenidos en lo
referente a la labor de asesoramiento al profesorado. Para la redaccin de los resultados se ha
tenido en cuenta la fusin del rol en la que desarrollaron su labor y la negociacin del rol
vinculada a la influencia que las profesionales tenan sobre los asesorados y su colegialidad.
Segn los testimonios de ambas orientadoras la manera ms adecuada de trabajar con el
profesorado es partiendo del respeto por los docentes y por el trabajo realizado por los
mismos. Ambas muestran una clara concepcin de que el trabajo en equipo es necesario para
un desarrollo integral del alumnado, un trabajo en donde todos los integrantes de la
comunidad educativa tienen su funcin e importancia en el proceso. Por lo que para trabajar
con ellos se debe partir de la prudencia y el respeto.
978-84-695-8363-0
474
Adems consideran que el trabajo del orientador con el profesorado se debe llevar a
cabo con mucha coordinacin. Ambas orientadoras afirman que el trabajo sin coordinacin
con el profesorado para atender a la diversidad del centro no funciona. Pero tambin opinan
que cuando el profesorado acude al responsable de orientacin del centro es ms por
necesidad que por voluntad, o por deseo de colaboracin. Siendo clave la necesidad de
ganarse la confianza del profesorado para que tenga al orientador como un profesional de
referencia en el centro.
La clave del proceso para las entrevistadas es un esfuerzo comn de toda la comunidad
educativa para intercambiar puntos de vista e informacin, desde el rol que ocupa cada uno,
sobre el proceso de enseanza-aprendizaje. Pero para poder trabajar ptimamente en
colaboracin el orientador/a y el profesorado va a depender principalmente de la voluntad del
profesorado, ya que es necesario que el docente quiera ser asesorado para obtener la mejora
del alumnado.
Adems siguiendo el relato de las entrevistadas, consideran que el orientador tiene que
demostrar que su trabajo ofrece resultados ptimos. Todo ello por lo tanto marcado por las
condiciones de negociacin del rol de asesoras.
Por lo tanto para el desarrollo de la relacin orientador/profesorado en el centro es
crucial poder conseguir una relacin de colegialidad entre compaeros de trabajo, por medio
de la influencia; para poder lograr que el asesor adquiera credibilidad en la labor. Ya que
siguiendo las afirmaciones de las entrevistadas consideran que la orientacin tiene que ser un
contacto personal entre dos o ms profesionales, pero en donde debe surgir un sentimiento de
cercana, de empata, hacer entender al profesorado que el orientador est ah
permanentemente. Es necesario llegar a comunicar el modelo de cada orientador sobre
atencin a la diversidad, consensuar objetivos, metodologas, compartir recursos, y tambin
saber qu es lo que el profesorado espera del orientador/a. Para ello hay que valorar y aceptar
lo que el profesorado trasmite. En consecuencia el trabajo en equipo ha estado muy presente
en la prctica de las orientadoras. Adems no solo apoyan la versin sino que a lo largo de su
discurso relatan diversas experiencias donde efectivamente demuestran que han desarrollado
con esta concepcin su trayectoria profesional. Muestran su implicacin como profesionales
en iniciativas de mejora de la educacin e incluso del desarrollo de capacidades de trabajo en
equipo.
Ambas tienen una opinin similar a la hora de entender qu es lo necesario para
conseguir xito con el trabajo. Los proyectos llevados a cabo por un equipo de trabajo
suponen la implicacin de los miembros del profesorado, suponen el desarrollo de un trabajo
en equipo con la meta de la mejora de la atencin a los nios, y su educacin. Todo ello
desarrollado en un contexto en donde la orientadora debe construir el rol de asesora para
poder llevar a cabo con satisfaccin su labor. Las profesionales consideran que la manera de
ganarse el respeto y la confianza de los profesores para el desarrollo de la labor es teniendo
paciencia y mostrando resultados. Y por supuesto demostrando tica a la hora de hacer el
trabajo con los compaeros, siendo esta ltima una caracterstica importante del
asesoramiento.
Por ltimo una parte fundamental a la hora de definir el rol de asesoras en orientacin es
el aprendizaje que se adquiere del trabajo colaborativo. Consideran que la visin
enriquecedora que aporta el profesorado, su visin de cambio, los matices, las formas de
978-84-695-8363-0
475
enfocar los trabajos, es un aprendizaje muy positivo para el propio crecimiento profesional del
responsable de Orientacin del centro.
Por lo que el tema de la labor de asesoramiento es percibido por las entrevistadas como
que docentes y profesionales de la orientacin se necesitan mutuamente y en condiciones de
igualdad para articular una teora comn que responda a las demandas del mundo actual y que
permita una adecuacin a lo que el alumnado necesita.
Conclusiones
Teniendo en cuenta que el objetivo del estudio visibilizar las experiencias de las
orientadoras rememorando aspectos importantes de su labor como orientadoras y de sus
funciones como de asesoramiento, los testimonios recogidos en las sucesivas entrevistas
ponen de manifiesto cmo las orientadoras han adquirido sus concepciones profesionales a
travs de experiencias vinculadas a los hechos de su vida profesional relacionados con el trato
con el profesorado de igual a igual.
Con respecto a la construccin del rol de asesoras los hallazgos ponen de manifiesto que
ste se configura principalmente en torno a una concepcin de la orientacin como una
prctica fundamentalmente colaborativa, en la que la coordinacin entre el profesional de la
orientacin y el profesorado es clave. De igual forma el trabajo basado en el respeto al
profesorado permite ayudarles en la tarea de proporcionar currculos apropiados y flexibles
adaptados a las caractersticas del alumnado con necesidades (atencin a la diversidad).
Tambin manifiestan que el profesorado busca el asesoramiento estimulado por la diversidad
del alumnado que le obliga a cuestionar los mtodos de enseanza tradicionales y le lleva a
buscar nuevas y ms eficaces estrategias de actuacin y, por tanto, a solicitar y valorar el
apoyo recibido por las orientadoras. En lo referente al desarrollo de sus funciones como
asesoras hay que remarcar su preocupacin por el trabajo en el marco de una orientacin ms
preventiva con el profesorado. Y aunque sus funciones siempre han estado marcadas por la
normativa, han realizado funciones de asesoramiento y apoyo al profesorado por iniciativa
personal con mucha anterioridad a que la normativa marcara la funcin de asesoramiento al
profesorado como tal. Debido esto a una preocupacin de las orientadoras entrevistadas por la
orientacin no solo teraputica sino preventiva.
Para concluir, debemos resaltar que las informantes en la labor de asesoramiento al
profesorado tuvieron por un lado que prevenir posibles dificultades de aprendizaje y ofrecer
ayuda al profesorado para que guiase al alumnado, siendo las responsables de la atencin a la
diversidad del centro. Y por otro lado tuvieron que construir su rol de asesoras con el
profesorado superando las dificultades y obstculos que en su trabajo surgan, ganndose con
esfuerzo el reconocimiento de su trabajo por parte de los docentes.
Referencias
Bolvar, A., Domingo, J. y Fernndez, M. (2001). La investigacin biogrfico-narrativa en
educacin. Enfoque y metodologa. Madrid: La Muralla
Boza Carreo, A., Toscano Cruz, M. y Salas Tenorio, M. (2007). Qu es lo que hace un
orientador?: roles y funciones del orientador en educacin secundaria. XXI Revista de
Educacin, 9, 111-131.
978-84-695-8363-0
476
978-84-695-8363-0
477
Resumen
El trabajo que presentamos forma parte de un proyecto I+D ms amplio financiado por el
MEC-2010 y que pretende disear y evaluar una plataforma virtual para la elaboracin de
proyectos profesionales. En esta aportacin se recogen los resultados del anlisis de
necesidades de informacin y orientacin profesional del alumnado de Formacin
Profesional de Huelva. Para ello se realizaron grupos de discusin con profesores tutores,
profesores de formacin y orientacin laboral (FOL), tutores de prcticas, profesores
tcnicos, maestros de de programas de cualificacin profesional inicial (PCPI) y
orientadores de cuatro centros de la provincia de Huelva. Los resultados indican una alta
desmotivacin del alumnado, una escasa capacidad de toma de decisiones, un
desconocimiento de los itinerarios formativos a seguir, la necesidad de refuerzo y apoyo en
estrategias de bsqueda de empleo, as como la ausencia de un proyecto profesional
personal.
Descriptores: Investigacin educativa, informacin profesional, orientacin profesional,
formacin profesional.
Abstract
The project presented by us is part of a R&D project financed by The Ministry of Education
in 2010. This work pretends to design and evaluate a virtual classroom developing of several
professional projects. In this work, we show the different results of the Analysis of the career
information and vocational guidance needs of the vocational training students from the
province of Huelva. For that reason, debate forums with professors, students, school
counselors from four different High Schools and tutor teachers have been created. The study
of the results denotes a high lack of motivation in pupils, a slender capacity taking a stance,
lack of awareness in educational itineraries, the necessity of reinforcement and support
strategies looking for a job and the absence of a personal and professional plan.
Keywords: Educational research, career information, vocational guidance, vocational
education.
978-84-695-8363-0
478
Introduccin
El aprendizaje a lo largo de la vida es desde hace unos aos un claro objetivo ante el
que dar una respuesta por parte del sistema educativo en general y por parte de la Formacin
Profesional en particular, sobre todo por parte de aquellas sociedades en las que la
informacin y el conocimiento cada vez fluye con ms intensidad y en las que son necesarias
diversas pautas de actuacin con las que orientar la trayectoria vital, profesional y acadmicas
de los ciudadanos. En este sentido, la orientacin profesional es una disciplina del
conocimiento que cada vez ms est adquiriendo un estatus importante en el seno de los
procesos de cualificacin y formacin profesional, y as se sealan a lo largo de la historia en
algunas de las iniciativas llevadas a cabo por distintos organismos/entidades (Cumbre de
Lisboa (2000) desde donde se proyecta todo este planteamiento, iniciativas de la OCDE
(2001), que subrayan la importancia de que las personas aprendan a gestionar, de forma
autnoma, consciente y motivada su proceso de formacin permanente, o el Proyecto sobre el
fortalecimiento de las polticas, sistemas y prcticas en materia de orientacin permanente
(CE, 2004), en el que se pide a los estados miembros que revisen los actuales servicios
nacionales y que los refuercen en todos los campos).
En Espaa, la importancia de la orientacin profesional para integrarse en todo el
proceso que implica la atencin a la formacin integral de la persona, aparece ligada en
primer trmino a la Ley Orgnica 5/2002 de las Cualificaciones y la Formacin Profesional
en su artculo 14, en el que se hace referencia explcita a la informacin y la orientacin
profesional, para posteriormente concretarse mucho ms su implicacin en la enseanza a
travs de otros Reales Decretos: el RD 1558/2005 por el que se regula la creacin de Centros
Integrados de Formacin Profesional y en el que la orientacin profesional es una de sus
funciones, o el RD 229/2008 por el que se regulan los Centros de Referencia nacional en el
mbito de la Formacin Profesional, para finalmente destacar la Ley Orgnica de Educacin
(2006), en la que se permeabilizan los niveles (Formacin General-Formacin Profesional y
viceversa, Formacin Profesional- Universidad, o Formacin Profesional-Mercado de trabajo
y viceversa), y la Ley 2/2011, de 4 de marzo, de Economa Sostenible por la que se adiciona
un nuevo artculo 15 bis a la Ley Orgnica 5/2002: los servicios de informacin y orientacin
profesional.
A raz de toda esta propuesta es evidente que la orientacin profesional ha cobrado
especial relevancia dentro del marco nacional en su relacin con la Formacin Profesional
sostenida por el Sistema Educativo, aunque siguen siendo insuficientes los programas y
materiales didcticos de orientacin existentes para aprender a construir proyectos
profesionales y vitales por parte del alumnado de Formacin Profesional. Fruto de ello, es
por lo que surge el Proyecto ORIENT@CUAL: elaboracin de proyectos profesionales en la
formacin profesional del sistema educativo. Diseo de un programa y una plataforma virtual
de orientacin. Un proyecto I+D liderado por la Universidad de Sevilla y financiado por el
Ministerio de Educacin en la convocatoria de Ayudas a proyectos de investigacin del ao
2010, y cuya finalidad es ofrecer un programa de orientacin profesional dirigido al
alumnado de Formacin Profesional del Sistema Educativo para que pueda elaborar su
proyecto profesional y vital. Asimismo, ofertar y una aplicacin virtual de apoyo al
profesorado de Formacin Profesional y orientadores/as del Sistema Educativo para el
desempeo de la funcin de orientar al alumnado. Ambas herramientas se basarn en enfoque
de orientacin comprensiva y sistmica para el desarrollo de la carrera profesional.
(Orient@cual, 2010).
978-84-695-8363-0
479
Objetivos
La investigacin que presentamos forma parte del Proyecto Orient@cual, y
concretamente, damos respuesta a los dos objetivos iniciales de la primera fase del proyecto:
- Identificar las necesidades de informacin y orientacin profesional del alumnado de
Formacin Profesional del Sistema Educativo en sus distintos niveles: Nivel 1 (Programas de
Cualificacin Profesional Inicial -PCPI), Nivel 2 (Ciclos Formativos de Grado Medio-CFGM)
y Nivel 3 (Ciclos Formativos de Grado Superior-CFGS).
- Analizar la situacin actual de la informacin y la orientacin profesional dirigida a este
alumnado: cules son las actuaciones que se llevan a cabo en los centros que imparten estas
enseanzas, cules son las competencias que deben desarrollar los profesionales encargados
de la orientacin.
Mtodo
El presente estudio parte del empleo de una metodologa de carcter cualitativo, del
tipo estudio de caso de evaluacin de necesidades. La muestra seleccionada hace referencia a
4 centros educativos de la provincia de Huelva elegidos en base a un sistema de sistema de
muestreo aleatorio estratificado por conglomerados, tomando como referencia el nivel de
formacin profesional impartida: Programas de Cualificacin Profesional Inicial (PCPI);
Ciclos Formativos de Grado Medio (CFGM); Ciclos Formativos de Grado Superior (CFGS),
las familias profesionales y la provincia, sobre un total de 80 centros andaluces que componen
la poblacin objeto de estudio del proyecto marco. A partir de esta muestra, la informacin ha
sido recopilada a partir de la realizacin de dos grupos de Discusin (GD1, GD2) distribuidos
as: - Grupo Discusin 1 (CF GM Y GS): 4 orientadores, 4 profesores-tutores, 6 profesores
FOL, 3 profesores-tutores de prcticas.
- Grupo Discusin 2 (PCPI): 2 orientadores, 4 maestros PCPI, 1 profesor FOL, 5 profesorestcnicos.
Anlisis de datos
El anlisis de la informacin procedente de los grupos de discusin se ha llevado a
cabo a travs de un proceso de reduccin de los mismos (categorizacin recogida en la tabla
1), descripcin del contenido de cada una de las categoras, ilustrndolo con citas textuales,
triangulando los diferentes temas, y la extraccin y verificacin de conclusiones.
978-84-695-8363-0
480
Tabla 1
Categorizacin de la informacin
Necesidades de orientacin profesional del alumnado
de FP
Algunos de los resultados obtenidos en cada una las dos grandes macrocategoras de
anlisis son:
Necesidades de orientacin profesional del alumnado de FP
- Categora 3.Grado de autoestima personal autoempleo (GD2): MAESTRO 2: Por lo general
poseen la autoestima muy baja, les cuesta participar en clase, leer en alto, salir a la pizarra
- Categora: 4.Conocimiento de itinerarios formativos (GD1): TUTOR 3: En el caso de grupos
de alumnos/as de Ciclos de Formacin Profesional de Grado Superior el conocimiento acerca
de los itinerarios formativos es mucho mayor que en comparacin con los grados medios. Un
gran nmero de alumnos/as que cursan estudios de grado superior lo hacen con objeto de
posteriormente incorporarse a estudios universitarios relacionados con la familia profesional,
hecho que demuestra cierto conocimiento ante los itinerarios formativos, aunque si bien es
cierto, no tienen conocimiento de toda la informacin de manera precisa y exacta.
- Categora 6.Conocimiento de formas de acceso al empleo y autoempleo (GD2): TECNICO
3: Muchos ven el ciclo formativo como un modo de acceder al mundo laboral en cuanto,
gracias a las prcticas, los ponen en contacto con las empresas.
- Categora: 8. Capacitacin para elaborar su proyecto profesional y vital (GD1): FOL 4:
Como consecuencia de sus caractersticas personales y por el momento vital que viven,
generalmente no proyectan, no se marcan objetivos-metas claras, alcanzables ni estructuran el
proceso con los medios necesarios para alcanzarlos. Por supuesto que creo que tienen
capacidad, pero no estn entrenados para situarse ante la vida en esta clave.
Situacin de la orientacin profesional en la FP
- Categora 1. Actuaciones que se llevan a cabo (GD1): FOL 2: Desde el mdulo de FOL se
planifican prcticas sobre orientacin sociolaboral, encuadradas en el bloque de
conocimientos correspondientes a este mbito. Desde el mdulo de Empresa e Iniciativa
Emprendedora, adscrito al Departamento de FOL, se planifican actuaciones sobre fomento de
iniciativas emprendedoras y desarrollo de proyectos empresariales.
978-84-695-8363-0
481
978-84-695-8363-0
482
978-84-695-8363-0
483
978-84-695-8363-0
484
978-84-695-8363-0
485
978-84-695-8363-0
486
Resumen
El Servicio de Orientacin e Informacin al Alumnado (SOIA) es un servicio de orientacin
especfico de la Facultad de Educacin de la Universidad de La Laguna. Fue creado para
informar y ayudar a los alumnos a lo largo de su proceso formativo. El S.O.I.A. pretende
potenciar actividades tutoriales y de orientacin para la mejora de la calidad educativa de la
Facultad de Educacin dando respuesta a las necesidades y demandas la comunidad
educativa de esta Facultad. Las tareas que desarrolla son bsicamente de informacin,
formacin, gestin e investigacin y las realiza en colaboracin con profesores y estudiantes
de la Facultad de Educacin. El presente trabajo presenta los resultados de evaluacin de los
niveles de satisfaccin de los alumnos de la Facultad de Educacin que, como tales, hicieron
uso del servicio durante el curso 2011-2012. A lo largo de ese curso acadmico se recogieron
las valoraciones de los alumnos, mediante un breve cuestionario, con el fin de valorar la
satisfaccin de los usuarios respecto a la informacin y orientacin ofrecida, la atencin
recibida y la formacin impartida.
Descriptores: Evaluacin, Satisfaccin, Tutora, Orientacin.
Abstract
The Service Student Guidance and Information (SOIA) is a service specific guidance from the
Faculty of Education at the University of La Laguna. It was created to inform and help
students along their learning process. The S.O.I.A. aims to boost tutorials and guidance
activities to improve the quality of education in the Faculty of Education in response to the
needs and demands of the educational community of the Faculty. The tasks carried out are
basically information, training, and management and research in collaboration with faculty
and students of the Faculty of Education. This paper presents the results of evaluation of the
satisfaction levels of students in the Faculty of Education, as such, they made use of the
service during 2011-2012. Throughout the academic year were collected student ratings,
using a short questionnaire, to assess the user satisfaction for the information and guidance
offered, the care and training provided.
Keywords: Evaluation, Satisfaction, Mentoring, Counseling, Guidance.
978-84-695-8363-0
487
Introduccin
En nuestro pas el proceso de institucionalizacin de la orientacin y la tutora en
niveles universitarios no ha contado con una tradicin lo suficientemente consistente como
para articular la consolidacin de la misma. En los ltimos tiempos, se realza el principio de
desarrollo otorgado a la orientacin, enfatizando su importancia hasta el punto de reivindicar
su continuidad a lo largo de la vida adulta. Si partimos de esta realidad entendemos que las
universidades debieran incorporar elementos de orientacin en sus diversos programas de
estudio. En numerosos trabajos (Snchez, 2001; lvarez, 2002; Cabrera, Bethencourt,
lvarez, y Gonzlez, 2006; lvarez y Gonzlez, 2008) se sealan algunos factores que
apuntalan la necesidad de crear y sostener servicios de orientacin y tutora universitaria. Este
hecho, no slo propicia la mejora de los procesos de insercin y transicin al sistema sociolaboral sino que adems incrementa la calidad ofrecida en los estudios superiores. Los autores
subrayan, como justificacin de la necesidad de la orientacin en la etapa adulta, algunos
elementos alarmantes que emergen en el contexto de la universidad como: las tasas de
abandono y repeticin, la desorientacin acadmica y profesional, el desencuentro entre la
formacin superior y las demandas del mundo socio-laboral. Estos factores vienen dados, en
su mayora, por las dificultades del alumnado al abordar las exigencias propias del proceso
formativo, por las limitaciones de tiempo y de recursos y por la falta de metas claras que
presentan los estudiantes (Gonzlez, lvarez, Cabrera y Bethencourt, 2007; lvarez y Lpez,
2011).
Es un hecho constatado que el acceso a la educacin superior expone al estudiantado a
elaborar un proceso de transicin clave en su proyecto vital, requiriendo de ayuda y
asesoramiento permanente (Rodrguez, Fita y Torrado, 2004; lvarez, Figuera y Torrado,
2011). Por ello, tareas como la aportacin de informacin acadmica y del desarrollo de la
carrera, la implementacin de programas de accin tutorial, la puesta en marcha de
actividades de apoyo al proceso de enseanza-aprendizaje y de mejora de las competencias,
entre otras, constituyen acciones indefectibles en el trnsito entre la educacin superior y la
universidad.
Por otro lado, el efecto de la globalizacin en el marco institucional de la educacin y
la orientacin plantea nuevos retos a abordar desde las vertientes acadmico y profesional de
la formacin superior. Sin lugar a dudas, la globalizacin es un fenmeno que cada vez va a
influir ms y ms directamente sobre las polticas educativas de todos los pases (Guarro,
2005, p. 28). En este sentido, es coherente que el subsistema educativo deba gestionar los
procesos de cambio socioeconmico, aadiendo nuevos significados y elementos a la
orientacin y a la accin tutorial. Como expone lvarez (2008), estos procesos de cambios
van de la mano de las propias transformaciones en el seno de la institucin universitaria. Los
autores detallan cinco puntos relevantes que estn sufriendo modificaciones y/o acarreando
variaciones de carcter significativo en este mbito:
1. La poblacin universitaria; la diversificacin y la heterogeneidad del estudiantado plantea
un perfil del estudiante cambiante. De este modo, se ha incrementado la necesidad de
informacin, la focalizacin del punto de mira en la mejora de los aprendizajes y de la
orientacin curricular de cada tipo de estudiante. De hecho, el modelo de educacin
inclusiva, defiende que los centros educativos deben atender a las necesidades de la
diversidad de alumnado con caractersticas personales, psicolgicas y sociales diferentes
(lvarez, Alegre y Lpez, 2012). Se pone as de manifiesto que uno de los indicadores de
978-84-695-8363-0
488
978-84-695-8363-0
489
La mayora de los usuarios son mujeres (91,2% frente a 8,8% hombres); en cuanto a la
titulacin que cursan los usuarios, el 67,3% estudian Pedagoga frente al 32,7% que estudian
Magisterio. Todos estos alumnos han participado en las actividades desarrolladas por el
servicio de orientacin e informacin del alumnado. Mediante una escala de valoracin (de 1
a 4) se les ha pedido que valoren el grado de satisfaccin respecto a: satisfaccin general,
978-84-695-8363-0
490
87,8%
61,2%
49,0%
36,7%
Cabe indicar que si bien el 87,8% de los alumnos muestran una alta o muy alta
satisfaccin general con el servicio, hemos de indicar que valoran preferentemente como alto
o muy alto; la formacin y cualificacin de los colaboradores, la ubicacin del servicio y la
calidad de los materiales entregados en los cursos de formacin. Sin embargo los horarios y
el contacto con el servicio obtienen una valoracin mucho ms baja. Vase Tabla 3.
Tabla 3
Valoracin de los servicios del SOIA
Aspectos valorados
Satisfaccin general con el servicio
Resolucin de problemas
Formacin
y
cualificacin
de
colaboradores
Facilidad para acceder
Calidad de los materiales
Adecuacin del horario
Ubicacin del servicio
Calidad de los cursos y formacin
los
1
0,0%
0,0%
0,0%
2
10,2%
20,4%
10,2%
3
55,1%
30,6%
59,2%
4
34,7%
49,0%
30,6%
10,2%
0,0%
26,5%
0,0%
0,0%
22,4%
16,3%
28,6%
0,0%
10,2%
53,1%
59,2%
38,8%
61,2%
75,5%
14,3%
24,5%
6,1%
38,8%
14,3%
978-84-695-8363-0
491
Tabla 4
Diferencias de la satisfaccin de los usuarios del servicio en funcin de las variables de control
DIFERENCIAS POR
GRADO GENERAL DE
SATISFACCIN CON EL
SOIA
Resolucin de problemas
Formacin y cualificacin de
los colaboradores
Facilidad para contactar
Prueba de
Levene
F
p<
20,837
42,576
5,102
8,147
15,452
5,521
,000
,000
,029
,006
,000
,023
Niveles
M (Sd)
p<
-4,56
Insatisfec
ho
Satisfecho
10
,000
Insatisfec
ho
Satisfecho
10
Insatisfec
ho
Satisfecho
10
Insatisfec
ho
Satisfecho
10
Insatisfec
ho
Satisfecho
10
Insatisfec
ho
Satisfecho
10
2,42
(,77614)
3,43
(,69542)
2,26
(,61168)
3,34
(,47949)
1,54
(,84163)
2,90
(64043)
1,12
(,64021)
3,20
(,55320)
1,15
(,92490)
2,38
(,86846)
2,13
(,49229)
3,16
(,36999)
-6,19
-19,77
-14,44
-3,53
-20,78
80
80
80
80
80
80
,000
,000
,000
,001
,000
,910
R cuadrado
corregida
,799
Error tpico de
la estimacin
,28235
Tabla 6
Modelo
1 Regresin
Suma de
cuadrados
15,793
gl
Sig
28,299
0,000
978-84-695-8363-0
492
Tabla 7
Modelo
1 (Constante)
Formacin
colaboradores
Calidad de los
materiales
Calidad de los
cursos
Beta
Sig
1,249
1,212
8,302
0,000
0,269
0,273
2,401
0,021
0,618
0,489
4,248
0,000
Conclusiones
El SOIA es un servicio considerado por sus usuarios como necesario y fundamental.
Debemos tener en cuenta que dado que el momento en que el alumno inicia su contacto con el
SOIA es el primer ao de ingreso en la Facultad, es por esto que demanda en general
informacin y aclaracin de dudas, lo que nos hace suponer que se enfrente en sus inicios a
una importante falta de informacin. Esto le lleva a una demanda importante de cursos
formativos. Esta idea justifica el que los alumnos hagan propuestas de mejora y formacin
referidas a la ampliacin de los cursos de formacin, demandando especialmente los de
tcnicas de estudio.
Se observa una baja valoracin de los horarios de atencin al alumnado y con relacin
a esto, la dificultad de contactar con el servicio. Debemos tener en cuenta que en los dos
ltimos aos el servicio dispona de un horario reducido (slo dos das en semana) para
atender al alumnado lo que puede haber influido determinantemente en esta valoracin. Esta
idea justifica el que los alumnos hagan propuestas de mejora referidas a la adecuacin y
ampliacin de los horarios.
La formacin y cualificacin de los colaboradores, la calidad de los materiales que
ofrece a travs de trpticos informativos, informacin web, etc. y la formacin que ofrece son
determinantes de la satisfaccin de los usuarios. La circunstancia de que sean las variables
que ms diferencias han marcado entre alumnos, puede justificar el hecho de que sean
variables de peso en la determinacin de la satisfaccin general. Las propuestas de mejora y
formacin tienen como referente la adecuacin de los horarios y la ampliacin de los cursos
de formacin demandando especialmente los de tcnicas de estudio
Referencias
lvarez, M. (2008). La tutora acadmica en el espacio europeo de la educacin superior.
Revista Interuniversitaria de Formacin del Profesorado, 22, 77-88.
lvarez, M., Figuera, P. y Torrado, M. (2011). La problemtica de la transicin bachilleratouniversidad en la Universidad de Barcelona. REOP, 22(1), 15-27.
lvarez, P. (2002). La funcin tutorial en la universidad: una apuesta por la mejora de la
calidad de la enseanza. Madrid: EOS.
lvarez, P. (2012). Los planes de tutora de carrera: una estrategia para la orientacin al
estudiante en el marco del EEES. Revista Educar, 48(2), 247-266.
978-84-695-8363-0
493
lvarez, P. (2013). La tutora como eje articulador del proceso de aprendizaje del alumnado
universitario. Revista Qurriculum, 26, 73-88.
lvarez, P. y Gonzlez, M. (2008). Anlisis y valoracin conceptual sobre las modalidades de
tutora universitaria en el espacio europeo de educacin. Revista Interuniversitaria de
Formacin del Profesorado, 22(1), 49-70.
lvarez, P. y Lpez, D. (2011). El absentismo en la enseanza universitaria: un obstculo
para la participacin y el trabajo autnomo del alumnado. Bordn, 63(3), 43-56.
lvarez, V. y Lzaro, A. (2002). Calidad de las universidades y orientacin universitaria.
Mlaga: Aljibe.
Cabrera, L., Bethencourt, J. T., lvarez, P. y Gonzlez, M. (2006). El problema del abandono
de
los
estudios
universitarios.
Disponible
en:
http://www.uv.es/RELIEVE/v12n2/RELIEVEv12n2_1.htm. Fecha de consulta:
11/02/2013.
Garca, M. (2006). Las competencias de los alumnos universitarios. Revista Interuniversitaria
de Formacin de Profesorado, 20(3), 253-269.
Gonzlez, M., lvarez, P., Cabrera, L. y Bethencourt, J. (2007). El abandono de los estudios
universitarios: factores determinantes y medidas preventivas. Revista Espaola de
Pedagoga, 65(236), 71-85.
Guarro, A. (2005). Los procesos de cambio en una sociedad compleja. Madrid: Pirmide.
Martnez, M. (2009). La Orientacin y la tutora en la universidad en el marco del espacio
europeo de educacin superior (EEES). Revista Fuentes, 9, 78-97.
Rodrguez, A. (2007). Las competencias en el espacio europeo de educacin superior:
tipologas. Humanismo y Trabajo Social, 6, 83-91.
Rodrguez, S., Fita, E. y Torrado, M. (2004). El rendimiento acadmico en la transicin
secundaria-universidad. Revista de Educacin, 334, 391-414.
Snchez, P. y Zubillaga, A. (2005). Las universidades espaolas ante el proceso de
convergencia europeo: anlisis de las medidas institucionales y acciones de
aplicacin y coordinacin. Revista de Educacin, 337, 160187.
978-84-695-8363-0
494
Resumen
Desde principios del siglo XXI las redes sociales de Internet se han convertido en un
fenmeno de masas, teniendo incidencia en mltiples escenarios. Las personas,
especialmente los jvenes, emplean habitualmente este tipo de aplicaciones basadas en las
TIC dentro de su vida diaria, profesional y para su formacin. El mbito educativo y de la
orientacin est influenciado por esta corriente de la conectividad o del conectivismo,
donde los profesionales en este contexto y sus destinatarios tratan de beneficiarse de las
potencialidades de dichas redes. La utilizacin de estos instrumentos en Orientacin
Educativa y Profesional posee gran significatividad (principales roles y funciones de los
orientadores a travs del empleo de redes sociales y buen uso de stas por parte de los
destinatarios de la Orientacin).Finalmente, existen fortalezas y debilidades derivadas de la
utilizacin de estas redes, siendo preciso su conocimiento para un ptimo aprovechamiento
en el desarrollo de tareas orientadoras.
Descriptores: redes sociales, orientacin educativa y profesional, TIC, conectivismo.
Abstract
Since the beginning of XXI century, Internet social networks have become a mass
phenomenon, taking effect in multiple scenarios. People, especially young people, commonly
use ICT-based applications within their daily and professional live and for their training. The
educational and guidance field is influenced by this connectivity or "connectivism" current,
where professionals in this area and their recipients try to benefit from the potential of such
networks. The use of these instruments in Educational and Vocational Guidance has great
significance (main roles and functions of counselors through the use of social networks and
good use of these by the recipient of the Guidance). Finally, there are strengths and
weaknesses arising from the use of these networks, being their knowledge necessary to reach
an optimum use in the development of orienting tasks.
Keywords: social networks, educational and vocational guidance, ICT, connectivism.
978-84-695-8363-0
495
Introduccin
El siglo XXI se caracteriza por el surgimiento de nuevos espacios de participacin y
articulacin humana, enfatizando el rol de las redes sociales en la dinmica mundial. En este
escenario, la vida econmica, poltica, cultural, se enfrenta a constantes cambios, sujeta a
las complejidades inherentes al mundo global, sus consecuencias y efectos inmediatos. La
revolucin de lo que hoy se denominan Tecnologas de la Informacin y Comunicacin -TIC(radio, televisin, informtica, mviles, aparatos de reproduccin visual, musical, etc.), surgi
en la ltima dcada del S. XX, dentro de la llamada Revolucin Digital, que ha propiciado
grandes cambios y transformaciones en la sociedad. Las TIC se introducen en la vida de los
ciudadanos a una velocidad vertiginosa; los efectos que Internet posee en la vida de los
usuarios conlleva a numerosos cambios en la manera de comunicarse, organizarse, trabajar y
divertirse
Con el paso del tiempo las TIC han ido evolucionando, al igual que lo han hecho las
comunicaciones personales en la Red. Desde los tradicionales programas de mensajera
instantnea hasta el concepto actual de Red Social, donde los usuarios ponen en comn
aficiones, gustos y vivencias, con la nica finalidad de que toda su red de contactos, que se
encuentra en constante crecimiento, tenga acceso a dicha informacin. En la actualidad, la
rpida evolucin de estas tecnologas en la sociedad, ha facilitado la configuracin de lo que
muchos denominan como la sociedad del conocimiento, sociedad de la informacin, sociedad
red. El desarrollo de esta idea se reafirma con el surgimiento de un fenmeno como es el de
las redes sociales, auspiciado tanto por el reconocimiento de la importancia de la
interconexin y conformacin de grupos como por los avances en el desarrollo de la
tecnologa conocida como Web 2.0, que permiten que las aplicaciones ya no residan en el
ordenador del usuario, sino en un servidor lejano (la nube), al que acceder por medio de
Internet. ste recupera as su papel de va de comunicacin, pero superando la dimensin
individual/personal, para situarse en la grupal/social.
El uso masivo de Internet o la popularizacin de sistemas de comunicacin mvil,
cada vez con mayores posibilidades de conectarse a Internet y hacerlo transmitiendo una gran
riqueza multimedia, estn propiciando esta nueva etapa caracterizada por la construccin de
redes sociales gracias al software social en que se basan las mismas, y tambin en un
incremento de contenidos y aplicaciones de libre acceso y abiertas a su posible modificacin
por cualquier usuario, que facilitan y popularizan cada vez ms el uso social de la tecnologa.
El concepto y fenmeno de red social en Internet supone una nueva forma de relacin humana
que se ha ido posicionando como uno de los medios de comunicacin online ms populares
en la Red, encontrndose en constante crecimiento.
Las redes sociales y las TIC se han convertido en herramientas esenciales para el
desarrollo personal de muchos ciudadanos, que las utilizan como medio de ocio y de
desarrollo personal. La mayora de sus usuarios son internautas menores de treinta y cinco
aos. Este perfil que utilizan de forma masiva Internet y todos los servicios que de ella
dependen ha sido denominado como nativos digitales, esto es, personas jvenes que han
integrado la tecnologa y los medios sociales como algo natural y primordial para el desarrollo
de su vida cotidiana, por conocer perfectamente el entorno y las posibilidades que ste les
otorga. Sin embargo, en el caso de los menores, stos no siempre conocen la transcendencia
de sus actos a travs de la Red ni las implicaciones que pueden llegar a suponer para sus vidas
y las de sus contactos. A pesar de los innumerables beneficios que conlleva la utilizacin de
los medios tecnolgicos, es necesario tener en consideracin cmo Internet, y especialmente
978-84-695-8363-0
496
las plataformas de difusin de informacin, estn siendo utilizadas como medio para propagar
contenidos violentos o lesivos contra menores de edad. No se trata pues de un medio exento
de posibles peligros, lo que puede suponer, en algunos casos, un freno para su crecimiento
ordenado y adecuado a la legislacin vigente. Especial trascendencia supone el hecho de que
los menores de edad sean los principales usuarios de este tipo de plataformas. Dadas las
caractersticas propias de los menores y su posicin inicial de mayor indefensin, las
instituciones pblicas y la legislacin actual les han otorgado un mayor grado de proteccin,
en aras de evitar, o al menos reducir, los efectos negativos derivados del mal uso de estas
plataformas.
Repercusin de las redes sociales en el mbito educativo
Tal y como apunta Echeverra (2001), en general, las TIC poseen importantes
incidencias en educacin. Entre ellas cabe destacar las siguientes:
Exige nuevas destrezas. Se trata de un espacio de interaccin social donde se pueden
hacer cosas, y para ello son necesarios nuevos conocimientos y destrezas. Adems de
aprender a buscar y transmitir informacin y conocimientos a travs de las TIC (construir y
difundir mensajes audiovisuales), se ha de capacitar a las personas para que puedan intervenir
y desarrollarse en los nuevos escenarios virtuales. Seguir siendo necesario saber leer,
escribir, calcular, tener conocimientos de ciencias e historia..., pero todo ello se
complementar con las habilidades y destrezas necesarias para poder actuar en este nuevo
espacio social telemtico.
Posibilita nuevos procesos de enseanza y aprendizaje, aprovechando las
funcionalidades que ofrecen las TIC: procesamiento de la informacin, acceso a los
conocimientos, canales de comunicacin, entorno de interaccin social.. Adems de sus
posibilidades para complementar y mejorar los procesos de enseanza y aprendizaje
presenciales, las TIC permiten crear nuevos entornos on-line de aprendizaje, eliminando la
exigencia de coincidencia en el espacio y el tiempo de profesores y estudiantes.
Demanda un nuevo sistema educativo con unos sistemas de formacin en el que se
utilizarn exhaustivamente los instrumentos TIC. Las redes telemticas constituirn nuevas
unidades bsicas del sistema (all los estudiantes aprendern a moverse e intervenir en el
nuevo entorno), se utilizarn nuevos escenarios y materiales especficos (on-line), nuevas
formas organizativas, nuevos mtodos para los procesos educativos... Y es necesario formar
educadores especializados en didctica en redes. La labor de las escuelas presenciales se
complementar con diversas actividades en estos nuevos entornos educativos virtuales
(algunos ofrecidos por instituciones no especficamente educativas), que facilitarn tambin el
aprendizaje a lo largo de toda la vida.
Exige el reconocimiento del derecho universal a la educacin. Toda persona tiene
derecho a poder acceder a estos escenarios y a recibir una capacitacin para utilizar las TIC.
Se debe luchar por esta igualdad de oportunidades aunque por ahora se ve lejana. Incluso los
estados ms poderosos tienen dificultades para defender este principio en el mundo virtual,
donde encuentran dificultades para adaptarse a esta nueva estructura transterritorial en la que
la grandes multinacionales pugnan por el poder. Por otra parte las instituciones
internacionales educativas (UNESCO, OEI, UE...) no tienen tampoco suficiente fuerza para
ello.
978-84-695-8363-0
497
Llegados a este trmino cabra cuestionarse hacia dnde se dirigen las redes sociales y
la educacin en el siglo XXI. El mbito educativo ha ido dando cabida a nuevas perspectivas
como la del Conectivismo en la era digital (Siemens, 2004). Hoy resulta habitual que los
jvenes manejen mucha informacin a travs de las herramientas web, pero se centran en la
que a ellos les interesa; simplemente encuentran y seleccionan lo que buscan al momento, sin
que necesariamente aprendan. Teoras como la del Conectivismo han tratado de pararse a
explicar cmo se interacta y aprende con las nuevas herramientas que brinda la era digital, y
cmo se debe preparar y ensear a los estudiantes en el buen uso de la informacin para que
construyan conocimiento y sean individuos de provecho. El reto desde esta perspectiva es el
de educar sus intereses, valorar sus sentimientos, potenciar su imaginacin, no perderles, no
cansarles, ayudarles, ensearles a pensar, a procesar, a interpretar y a compartir informacin
provechosa para su formacin; al igual que tambin hacernos asumir, familiarizarnos,
prepararnos y aceptar que las herramientas web son elementos fundamentales en los actuales
procesos de enseanza y aprendizaje.
El Conectivismo no debe ser considerado tan solo un modelo pedaggico que, desde
una formulacin terica novedosa, pretenda orientar o modificar las prcticas docentes.
Parece adems ser el resultado de una recuperacin e integracin de teoras anteriores, tales
como el Cognitivismo o el Constructivismo, impuesto por una realidad comunicativa y de
aprendizaje, propia de la era digital, que desborda la propia institucin escolar.
Roles de la orientacin en este nuevo escenario
La orientacin, como parte del mbito y proceso educativos, tiene en las redes sociales
de Internet una posibilidad para desarrollarse, construyendo un nuevo espacio definido y
caracterizado por lo siguiente (basado en Hart, 2011):
Se configura como un entorno personal para la orientacin. Personas y fuentes de
informacin confluyen en un espacio virtual para ayudar a otros a cumplir sus objetivos
(personales y profesionales).
En este entorno, la orientacin:
Se basa, frecuentemente, en procesos informales de complemento a los formales
desarrollados a travs de otros mtodos ms convencionales. No obstante no tienen por qu ir
parejos a procedimientos formales de orientacin, especialmente cuando el proceso de ayuda
se realiza entre iguales.
Es esencialmente grupal: los contactos se conectan e interactan en grupo.
Se facilita que sea intra-organizacional, es decir, entre usuarios del mismo
sistema/entidad. Adems puede ser mutua/recproca.
Se caracteriza por lo accidental: no suele existir una programacin exhaustiva de las
tareas orientadoras. El azar y el oportunismo priman en el logro de una orientacin deseada.
Por ejemplo, al estar en la red se puede compartir informacin de inters para unos y no til
para otros, etc. Asimismo, los procesos orientadores tienen un marcado carcter social, ya
que conecta a los usuarios; facilita la creacin de comunidades virtuales bajo unos intereses
comunes; permite a los usuarios comunicarse y conversar sobre mltiples temticas
relacionadas con la orientacin educativa y profesional; propicia establecer colaboraciones
978-84-695-8363-0
498
Adems de los roles que tienen como centro de inters el propio uso de las redes
sociales, estn tambin los relacionados con el desempeo de tareas tradicionales de la
orientacin a travs de este tipo de herramientas. En su momento la AIOEP (2003)
estableci las principales competencias internacionales a desenvolver por parte de los
orientadores educativos y profesionales. Partiendo de esta referencia, diferentes
investigaciones realizadas desde el Proyecto ICT Skills for Guidance Counsellors han servido
para ofrecer un marco de competencias innovadoras de orientacin vinculadas a las TIC que
cualquier profesional debera dominar para responder a las necesidades de los usuarios de sus
servicios (en el caso de los jvenes, muy acostumbrados ya a un contexto dominado por el
uso de las herramientas tecnolgicas e Internet). Entre estas competencias especficas se
978-84-695-8363-0
499
978-84-695-8363-0
500
978-84-695-8363-0
501
978-84-695-8363-0
502
I.
(2012).
Redes
sociales.
Disponible
http://recursostic.educacion.es/observatorio/web/es/internet/web-20/1043-redessociales. Fecha de consulta: 12/04/2013.
en:
978-84-695-8363-0
503
Rakovska, N. (2012). Manual para impartir orientacin profesional usando sitios web. Sofa:
Business Foundation for Education.
Siemens, G. (2004). A learning theory for the digital age.
http://www.elearnspace.org/Articles/connectivism.htm.
Fecha
15/04/2013.
Disponible en:
de
consulta:
978-84-695-8363-0
504
Resumen
Esta comunicacin se basa en una investigacin sobre el seguimiento y evaluacin durante 3
cursos consecutivos de las estructuras y modelos institucionales de orientacin implantados
en 9 CCAA. Se trata de identificar los fundamentos de los servicios de orientacin as como
los resultados alcanzados relativos a la eficiencia y la equidad. Este trabajo analiza los datos
referidos a la etapa de educacin secundaria relativos a la orientacin que se proporciona al
alumnado de los Programas de Diversificacin Curricular, mediante un cuestionario
aplicado a una muestra de profesorado tutor, orientadores/as y directores/as en Galicia.
Esta muestra procede de 32 institutos de educacin secundaria de las cuatro provincias
gallegas. En cada centro se encuest al orientador/a, hasta un total de 32, y al director/a,
hasta un total de 32, y a una muestra de profesores tutores, hasta un total de 107. El
cuestionario, adaptado a cada grupo informantes y a las peculiaridades del sistema de
orientacin gallego, preguntaba sobre las expectativas previstas y las necesidades
alcanzadas.
Descriptores: programas de diversificacin curricular, atencin a la diversidad, servicios de
orientacin, educacin secundaria obligatoria, calidad de la educacin, equidad de la
educacin.
Abstract
This paper is based on research about the evaluation of school counseling services and those
institutional models implemented in nine of Spains Autonomous Communities. The outcome
is to identify the bases of the services made available and the results in terms of quality and
equity in education obtained by those services. Specifically this document analyzes the data
related to secondary compulsory education in special needs programs, collected by a survey
of 171 educators from 32 secondary schools in Galicia. The questionnaire, adapted for each
informant group, analyzes the opinions of a sample of teachers, principals, and guidance
counselors, about their satisfaction with special needs support services in Galicia.
Keywords: Special needs, counseling services, secondary compulsory education, quality of
education, equity in education.
978-84-695-8363-0
505
Introduccin
A partir de la aplicacin de la LOGSE han ido apareciendo iniciativas legislativas y
programas que pretenden dar respuesta a las necesidades especficas de apoyo educativo en
las etapas de enseanza obligatoria. Entre estos programas destacan los Programas de
Diversificacin Curricular (PDC) que en los ltimos aos se han convertido en una de las
principales medidas de atencin a la diversidad para la ESO en Galicia, donde son muchos
los centros que ofertan esta modalidad de atencin a la diversidad. En cumplimiento del
artculo 22.2 de la LOE y del artculo 15 del Decreto 133/2007, se publica la Orden del 30
de julio de 2007 que regula en Galicia el acceso del alumnado a los PDC, las materias que
constituyen su currculo y se establece el procedimiento de autorizacin de estos programas.
Segn las propias disposiciones de la Consellera de Educacin e Ordenacin
Universitaria, el PDC es una medida extraordinaria de atencin a la diversidad para la
educacin secundaria obligatoria que se basa en el principio de flexibilidad, imprescindible
para adecuarse a las aptitudes, intereses, expectativas y necesidades del alumnado. Esta
medida flexibiliza los distintos elementos del currculo de forma que posibilita una
organizacin de los contenidos, actividades y materias del currculo diferente a la establecida
con carcter general, as como una metodologa especfica. Su finalidad es que el alumnado
alcance los objetivos generales y las competencias bsicas de la etapa de forma que pueda
obtener el ttulo de graduado en educacin secundaria obligatoria. La duracin de los PDCs es
de dos aos, aunque pueden establecerse programas de un ao de duracin.
El currculo de los PDC se organiza en mbitos y materias. Se diferencian dos mbitos.
Un mbito especfico de carcter lingstico-social que incluye objetivos y contenidos
curriculares de las materias de ciencias sociales, geografa e historia, lengua gallega y
literatura y lengua castellana y literatura. El otro mbito es el cientfico-tcnico e incluye
objetivos y contenidos curriculares de las materias de matemticas, biologa y geologa y
fsica y qumica. Las materias son lengua extranjera, educacin plstica y visual, educacin
fsica, msica, tecnologa y una materia optativa a cursar en tercero y cuarto de la ESO. El
alumnado de un PDC tiene un grupo ordinario de referencia en el que puede cursar las
materias y la hora de tutora grupal. Desde el punto de vista metodolgico, se opta por un
modelo de trabajo interdisciplinar o globalizado que fomente el trabajo activo y colaborativo
del alumnado, de forma que le ayude a adquirir el mayor grado posible de autonoma
personal y que incentive el aprender a aprender.
Para acceder a un PDC el alumnado tiene que tener cumplidos como mnimo 16
aos o cumplirlos durante el curso acadmico y presentar dificultades generalizadas de
aprendizaje. Otro de los requisitos es que, con anterioridad, el alumnado haya participado en
otras medidas de atencin a la diversidad. Otro criterio para la admisin es que el alumnado
haya cursado el 2 3 curso de la ESO y que no pueda promocionar al curso siguiente por
haber agotado las posibilidades de repeticin en la etapa. Tambin son candidatos los alumnos
que no superaron 4 y que agotaron las posibilidades de repeticin. Adems es imprescindible
que en este proceso haya expectativas razonables de que el alumno o alumna pueda alcanzar
los objetivos y competencias de la etapa. Por lo tanto, es necesario que el equipo docente
valore dichas posibilidad.
El tutor del grupo y el orientador desempean un papel relevante en todo el proceso.
En un primer momento, diagnosticando, proponiendo medidas para que el alumnado supere
sus dificultades, coordinndolas y haciendo su seguimiento. En un segundo momento,
978-84-695-8363-0
506
aportando informacin que justifique la incorporacin del alumnado a un PDC. Una vez que
el alumnado no ha conseguido los objetivos propuestos con las medidas previas, el tutor o
tutora, junto con el resto del equipo docente, sern los encargados de valorar si el estudiante
puede ser un candidato a participar en dicho programa; una decisin y valoracin que se tiene
que realizar en base a pruebas evidentes, que implican una recogida amplia y fundamentada
de informacin, extrada del anlisis de las diferentes fuentes posibles, esto es, trayectoria
acadmica del alumnado y situacin actual, reflexin con el equipo docente y los
representantes legales del estudiante, padre, madre o tutor legal.
Tomada la decisin de que es un candidato o candidata adecuada a la filosofa del PDC,
desde la jefatura del DO se complementar el informe emitido por la tutora con el
correspondiente informe realizado despus de una evaluacin psicopedaggica del alumnado,
si fuera el caso, o con lo acordado en la reunin mantenida entre el propio estudiante, su padre
y madre, o tutor, y las personas que ejercen la tutora en su clase. Para la configuracin del
grupo de alumnado que va a cursar un PDC, adems de los procesos especficos que se
realizan con cada estudiante, familia y profesorado, tambin existe un proceso para la
configuracin del grupo que va a participar en el programa. Existe una comisin de la que
forman parte las jefaturas de estudios y del DO, los tutores y tutoras de cada alumno o
alumna, que valorar cules son los candidatos a dicho programa. La propuesta ser remitida
a la inspeccin educativa, quien finalmente aprobar la propuesta o la rechazar.
Los hallazgos que se exponen en esta comunicacin proceden de la investigacin
Seguimiento de la evolucin de los distintos modelos institucionales de orientacin en las
Comunidades Autnomas espaolas, anlisis de sus fundamentos y evolucin de su eficiencia
en el apoyo a la calidad y a la equidad,27 realizada en nueve Comunidades Autnomas:
Andaluca, Canarias, Cantabria, Castilla La Mancha, Catalua, Galicia, Madrid, Navarra y
Pas Vasco. Los objetivos de la investigacin se concretan en los cuatro siguientes:
a) Valorar la evolucin y resultados de los nuevos sistemas de orientacin y apoyo a la
escuela establecidos en algunas CCAA.
b) Comparar y valorar la situacin de las CCAA estudiadas segn la idiosincrasia de
cada sistema de orientacin.
c) Identificar las competencias profesionales que cada modelo demanda de los
orientadores y de los nuevos especialistas que se van incorporando y su repercusin
en sus respectivos perfiles profesionales.
d) Identificar las CCAA que estn trabajando en un cambio de estructura y modelo,
analizar las causas que les llevan al cambio y el procedimiento seguido en el diseo
del nuevo modelo.
Nuestra comunicacin aporta algunos resultados relativos al primer objetivo, la
valoracin de los resultados del modelo institucional de orientacin gallego por parte del
profesorado tutor, orientadores y direccin de los centros. Concretamente, se aborda la
satisfaccin con el procedimiento seguido para incorporar al alumnado en los PDC y con el
papel del departamento de orientacin en la atencin de las necesidades del alumnado que
cursa este tipo de programa.
27
En las publicaciones Velaz de Medrano, Blanco y Manzano (2012) y Velaz de Medrano (2013) se puede n
consultar algunos de los resultados ms globales de esta investigacin.
978-84-695-8363-0
507
Mtodo
Para la recogida de datos se construyeron tres cuestionarios adaptados a los tres grupos
de informantes (profesorado tutor, direccin y orientadores/as). Los cuestionarios
presentaban una parte comn y otra especfica para cada una de las tres figuras encuestadas.
Tambin se adecuaron a las peculiaridades del sistema de orientacin gallego. Las preguntas
eran cerradas y en su casi totalidad la alternativas de respuesta se presentaban en escala tipo
Likert con seis categoras. Los cuestionarios se aplicaron en el curso 2010-2011. En el
procedimiento de recogida de informacin se dieron los seis pasos siguientes:
Solicitud de autorizacin formal y colaboracin a la Consellera de Educacin y
Ordenacin Universitaria de la Xunta de Galicia.
Envo de cartas institucionales de la Consellera y del Instituto de Formacin,
Innovacin e Investigacin Educativa (IFIIE) a los centros seleccionadas.
Contacto telefnico con la direccin de cada centro con el objetivo de presentar el
estudio e informar del procedimiento a seguir para la aplicacin de los cuestionarios.
Envo de los cuestionarios a los centros.
Recordatorio y seguimiento.
Recogida de cuestionarios en el propio centro.
En la seleccin de la muestra se consider el centro como unidad muestral. El tamao
de la muestra se calcul considerando un error del 5%, p = q =0,50 y un nivel de confianza
del 95%. El muestreo fue aleatorio y proporcional al nmero total de Institutos de Educacin
Secundaria (IES) de Galicia por provincia. En cada centro se encuest al orientador y a la
direccin. Para la muestra de tutores se seleccionaron para cada centro: dos tutores de 2 de la
ESO y dos de 4. En los centros que se podan cursar los PDC y los PCPI se aada a la
muestra un tutor de cada uno de estos programas.
La muestra final de centros tiene un centro menos del que corresponda a la muestra
calculada, es decir 32 en vez de 33. Su distribucin por provincia es equivalente a la
observada en la poblacin: los mayores nmeros y porcentajes de centros corresponde A
Corua (40,6%) y Pontevedra (31,3%) y los menores recaen en Lugo (15,6%) y Ourense
(12,5%). La muestra total de informantes fue de 31 directores, 32 orientadores y 107 tutores.
En la tabla 1 se presenta su distribucin por provincia. Los centros que imparten PCPI y PDC
suponen, respectivamente, el 58 % (18 centros) y el 83,9% (26 centros).
Provincia
A Corua
Lugo
Ourense
Pontevedra
Total
978-84-695-8363-0
508
Tabla 1
Distribucin de la muestra por provincia
Orientadores/as
Directores/as
%
N %
N
40,6
13 38,7
12
15,6
5 16,1
5
12,5
4 12,9
4
31,3
10 32,3
10
100
32 100
31
Tutores/as
%
39,3
15,9
11,2
33,6
100
N
42
17
12
36
107
Resultados
Satisfaccin con el procedimiento seguido para incorporar al alumnado a los PDC y
motivos de la insatisfaccin
En el cuestionario se someta a valoracin el proceso de toma de decisiones que se
sigue en el centro para incorporar al alumnado a un PDC. Las respuestas son de escala tipo
Likert con seis categoras, desde la total insatisfaccin a la mxima satisfaccin. En la tabla
2 aparecen reducidas a los dos polos de la escala.
Segn los datos de la tabla 2, cabe afirmar que el nivel de satisfaccin del profesorado
tutor, de los orientadores y de la direccin del centro con el proceso seguido para la
incorporacin del alumnado a los PDC es alto. La mediana se sita en la segunda categora
ms alta de la escala y la media se aproxima a este valor.
Tabla 2
Satisfaccin de orientadores/as, directores/as y profesorado tutor con el proceso de toma de
decisiones para incorporar al alumnado a un PDC
Insatisfaccin
Satisfaccin
N
Mediana
%
Orientadores/as
Tutores/as
Directores/as
13,3
5,5
10,7
4 86,7
5 94,5
3 89,3
26
87
25
30
92
28
4,90
4,75
4,86
1,094
1,135
,891
5
5
5
Las personas que haban considerado el proceso insatisfactorio tenan que valorar los
motivos que explicaran su insatisfaccin. Los motivos que se sometan a su consideracin se
relacionan con el procedimiento que se estable en la normativa que regula los PDC. En la
tabla 3 se presentan las respuestas, de su lectura cabe extraer las siguientes observaciones:
Circunstancias
No aplicacin medidas
ordinarias previas
No se realiza evaluacin
psicopedaggica
Se aplica
automticamente al
alumnado con
dificultades
Pesa demasiado la
voluntad de la familia.
Pesa demasiado la
voluntad del alumno/a
Se tiene poco en cuenta
la valoracin del tutor/a
Se ajusta a la normativa
vigente, con la que no
estoy de acuerdo
Se tiene poco en cuenta
la valoracin del DO
Se tiene poco en cuenta
la valoracin del EOE
978-84-695-8363-0
509
Tabla 3
Circunstancias que explican la insatisfaccin
Orientadores/as
Directores/as
Me N
Me
.
N
Profesorado tutor
Me.
N
1,000
3,75
,500
3,55
4
3
,000
1,000
4
3
4
4
3
3,50
1,414 3,50 4
,577 3,50 4
3,50 2,121
3,50
2,75
1,708
2,50
1,000
2,75
1,500
1,75
1,67
,577
1,67
,577
1,67
,577
2
1
,000
11
3,73 1 ,421
4,09 1 ,446
4
4
11
11
3,45 1 ,128
11
3,00 1 ,183
11
,957
1,50
3,18 1 ,250
11
1,633
3,27 1 ,421
11
3,67
,577
2,55 ,522
1,000
3,00 ,866
4
2
,934
11
11
978-84-695-8363-0
510
Tabla 4
Satisfaccin con la atencin del DO a las necesidades de orientacin escolar, acadmica y
profesional del alumnado de los PDC
Directores /as
Orientadores
Profesorado tutor
Me. N
Me.
N
Me. N
O. escolar
4,54
1,382
5 24 4,74
,944
5
27 4,90 1,060 5 84
O acadmica
4,58
1,316
5 24 4,78
,934
5
27 4,90 1,039 5 83
O. profesional 4,63
1,345
5 24 4,81 1 ,001
5
27 4,99 ,925
5 88
Discusin
Los datos que presentamos constituyen una primera aproximacin para valorar el
papel de la orientacin en los programas de diversificacin curricular en Galicia. Otros
estudios ms extensivos (Sobrado y Santos, 2004; Zabalza, 2005) sobre el sistema de
orientacin en Galicia no haban abordado anteriormente este mbito de la accin orientadora.
Considerando las limitaciones inherentes a la representatividad de la muestra, cabra
valorar de modo aproximado los hallazgos de esta investigacin en trminos de resultados
alcanzados por el sistema de orientacin, referidos especficamente al grado de cobertura de
las necesidades de orientacin personal, acadmica y profesional del alumnado de los PDC
por parte de los departamentos de orientacin. En este sentido, la principal conclusin es la
satisfaccin de las tres audiencias con el papel que al respecto desempea el departamento de
orientacin.
Otra aportacin interesante de nuestra investigacin se refiere al planteamiento de
nuevos interrogantes que pueden transformarse en objetivos de investigacin para futuras
indagaciones. Estos nuevos temas de indagacin estn relacionados principalmente con la
caracterizacin de la prctica de la orientacin y la tutora, con la cobertura de necesidades de
orientacin del alumnado por parte de los distintos agentes implicados (profesorado, tutora y
departamento de orientacin), as como la cobertura de necesidades de asesoramiento al
profesorado de los PDC en la funcin tutorial y en cuestiones ms metodolgicas. Dadas las
caractersticas del alumnado de los PDC y las problemticas que afronta su educacin, la
tutora tiene peculiaridades especficas vinculadas a la complejidad de su ejercicio y por tanto
requiere de una mayor necesidad de asesoramiento por parte del orientador u orientadora para
descubrir espacios de innovacin.
Otras posibles cuestiones de indagacin estn relacionadas con la valoracin de la
equidad que aporta la labor de orientacin en relacin con el perfil del alumnado. Las
necesidades de este tipo de alumnado requieren de una funcin orientadora que supere sus
carencias en trminos de desarrollo personal, acadmico y profesional. Por tanto sera muy
interesante profundizar en la caracterizacin de la orientacin que se despliega desde el DO y
especialmente desde la tutora preguntando por el nivel de satisfaccin de sus destinatarios
Referencias
Consellera de Educacin e Ordenacin Universitaria (2008). Gua del sistema educativo
gallego. Santiago: Trculo Artes Grficas, S. L.
Decreto 120/1998, 23 de abril, polo que se regula a orientacin educativa e profesional na
Comunidade Autnoma de Galicia (DOG del 27 de abril de 1998, n 79).
978-84-695-8363-0
511
978-84-695-8363-0
512
Introduccin
En nuestro pas se constata la escasez de estudios que recojan anlisis acerca de las
necesidades de orientacin de personas adultas (los existentes se centran sobre todo en las
poblacin universitaria) o sobre el impacto de la actividad orientadora, en contraste con la
mayor cantidad de estos que se centran en la orientacin en educacin primaria y secundaria.
Los pocos estudios que se han interesado por las personas adultas (De la Fuente y Gonzlez
Castro, 2009; Garca del Dujo y Martn, 2004; Labour Asociados Consultores, 2005; Padilla
Carmona, 2001; Snchez et al., 2011; Surez Ortega, 2008) han fijado su foco de atencin en
colectivos concretos (mujeres, inmigrantes, personas en riesgo de exclusin), lo que ha
978-84-695-8363-0
513
978-84-695-8363-0
514
Mtodo
Se trata de una investigacin no experimental, puesto que se analiza la situacin tal y
como se da en su entorno natural. Se enmarca en un enfoque metodolgico descriptivo y
diseo trasversal. Nuestro propsito es identificar las caractersticas, propiedades,
dimensiones y regularidades del fenmeno en estudio, es decir, identificar las necesidades de
orientacin de los usuarios del servicio de orientacin, adems de sus opiniones con respecto
al proceso.
La poblacin estuvo constituida por personas adultas, de 18 aos en adelante que,
estando o no en situacin de desempleo, son usarias de los servicios de orientacin o se han
planteado la posibilidad de acceder a estos servicios, concretamente, aquellos ubicados en la
Comunidad Autnoma andaluza. Como procedimiento de muestreo, hemos usado el muestreo
por cuotas no aletarorio, estableciendose estratos que representen las caractersticas
diferenciales de la poblacin en cuanto a los rasgos sociodemogrficos (gnero, edad,
situacin laboral, nivel de cualificacin, procedencia).
978-84-695-8363-0
515
respuesta, tanto para la tercera como cuarta parte, oscilaban entre "0" (mnimo acuerdo) y "5"
(mximo acuerdo).
La validez de constructo del instrumento se realiz a travs de un anlisis factorial. La
extraccin de factores se llev a cabo mediante el mtodo de componentes principales, con
objeto de obtener factores estadisticamente independientes y de mxima variabalidad al
tiempo que no se deformara la estructura de los datos. Como mtodo de rotacin se us la
Varimax, mtodo ortogonal, que conserva la suma de procentajes de varianza explicados por
los factores.
La extraccin obtuvo 6 factores con autovalor mayor que 1, que explicaron el 63,4%
de la varianza total. Se sigui la sugerencia de Pea (2002) de que el nmero mximo de
factores a extraer ha de ser menor a la mitad del nmero inicial de variables menos 1. El
primer factor explica un 18% de la varianza, mientras que los siguientes explican entre el
ocho y el cuatro por ciento, cada uno, lo que indica la importancia relativa del primer factor.
Este procentaje proporciona una evidencia de validez de constructo, en cuanto que no hay
acuerdo sobre el porcentaje de varianza mnima que debe explicar el primer factor, pero s que
este porcentaje debe ser claramente superior al explicado por los restantes.
Para el clculo estadstico del coeficiente de fiabilidad del cuestionario, como ndice
de consistencia interna, se ha empleado el modelo alfa, implementado en el paquete
informtico SPSS Statistics 21, que valora la consistencia interna de la escala a partir de la
correlacin inter-elementos promedio. El resultado obtenido, para las dos partes del
cuestionario, objeto de estudio, se muestra en la Tabla 1.
Tabla 1
Estadsticos de fiabilidad del instrumento
PARTES DEL CUESTIONARIO
Necesidades de orientacin
Opiniones sobre el proceso de
orientacin que ha seguido
TOTAL
ALFA DE CRONBACH
,946
,938
,949
ITEMS
n= 24
n= 13
n= 43
978-84-695-8363-0
516
978-84-695-8363-0
517
para
la
Con respecto a las necesidades para la bsqueda de empleo (Grfico 5), manifiestan
conocer las tcnicas para realizar dicha bsqueda y admiten buscar empleo de forma regular,
aunque la proporcin de acuerdo se reduce cuando se trata de disponer de una red de
contactos que pueda facilitarle el acceso a un empleo o mantenerse en el mercado laboral.
La ltima categora referida a las necesidades para la gestin y puesta en prctica del
proyecto, tambin obtiene porcentajes superiores a la media, aunque inferiores a las otras
dimensiones. Los usuarios son capaces de encontar el modo de conciliar satisfactoriamente su
vida familiar y profesional. Suelen aprovechar las oportunidades interesantes cuando surgen y
sacar el mximo partido a sus puntos fuertes, afrontando sus xitos y fracasos. Son
conscientes de las decisiones tomadas y las tienen en cuenta para mejorarlas en el futuro.
Los tems que componen la dimensin: conocer las opiniones de los usuarios con
respecto al proceso de orientacin que han seguido se distribuye en tres mbitos referidos al
grado de acuerdo con el proceso de orientacin que han seguido en el servicio de orientacin,
los aspectos tenidos en cuenta para la elaboracin del itinerario de insercin y la informacin
que debe ser mejorada por parte del servicio.
Con respecto a la opinin de los usuarios sobre el proceso de orientacin realizado
(Grfico 5 y 6), el grado de acuerdo es superior a la media en todos su tems. Los usuarios
coinciden en que el horario de realizacin se ajusta a sus circunstancias personales, se sienten
verdaderamente escuchados por los tcnicos de los servicios. Les resulta fcil encontrar y
acceder a los programas de orientacin y siguen utilizndolo posteriormente.
978-84-695-8363-0
518
Por otro lado, existe menor proporcin de acuerdo con respecto a sus expectativas en
el programa, consideran que no se est cumpliendo lo que ellos esperaban del programa de
orientacin. Tampoco se perciben como totalmente implicados en su proceso de orientacin,
en muchos casos, no se produce un cambio personal a raz de dicho proceso. Para la
elaboracin del itinerario de insercin, los usuarios conceden ms importancia a sus
conocimientos y habilidades, seguido de sus opiniones en la definicin de sus itinerarios. En
ltimo lugar, aunque con porcentajes de acuerdo superiores a la media, se tienen en cuenta las
circunstancias personales.
Por ltimo, los datos recogidos sobre qu informacin debe ser mejorada por parte del
servicio, observamos que la referida al autoempleo recibe mayores porcentajes de acuerdo,
seguida de la informacin relativa al mercado laboral, posibilidades de formacin, estrategias
de bsqueda de empleo, planificar y gestionar su vida profesional y, en ltimo lugar, aunque
con un porcentaje superior al 60%, se situa la informacin para mejorar el conocimiento de si
mismo.
Discusin
Segn los hallazgos encontrados, concluimos la existencia de una serie de necesidades
de orientacin para la elaboracin del proyecto vital y profesional de las personas adultas de
la Comunidad Autnoma de Andaluca. Los porcentajes ms elevados de necesidades tienen
que ver con la autoexploracin y con la formacin profesional. Si bien los usuarios
manifiestan necesidades de informacin sobre s mismos y de seguridad con respecto a su
futuro profesional, sobresalen las categoras relacionadas con el autoconcepto, as como con
la toma de decisiones vocacionales. Tambin los usuarios manifiestan necesidades de
formacin que, por orden decreciente, tienen que ver con la formacin para el empleo, el
aprovechamiento de dicha formacin, y la gestin y manejo de la informacin. Estos datos
coinciden con los aportados por De la Fuente y Gonzlez-Castro (2009), quienes concluyen la
necesidad de disear e implementar polticas activas de formacin y orientacin hacia los
desempleados, con itinerarios personalizados, que den respuesta a estas necesidades. Por su
978-84-695-8363-0
519
parte, el estudio de Snchez Garca et al. (2009) coincide en que las necesidades ms
prioritarias, esta vez analizadas desde la perspectiva de los orientadores, son aquellas referidas
al anlisis del mercado laboral, las competencias relativas a la gestin de la carrera y
elaboracin de proyectos profesionales realistas, las competencias emocionales, y las
habilidades para la autoexploracin.
Haciendo una valoracin conjunta de las necesidades expresadas por los usuarios,
detectamos que estos revelan una imagen sesgada acerca del imaginario que tienen sobre su
propia carrera profesional, especialmente en lo referido a la dimensin personal. Surez
Ortega (2008) constata la importancia que el desarrollo personal tiene en la elaboracin de los
proyectos profesionales, considerando que esta es la va para favorecer una mayor
autodeterminacin o empowerment, lo que posteriormente ayudar a los usuarios a clarificar
su posicionamiento frente al empleo.
Por otro lado, haciendo alusin a las necesidades para la gestin y puesta en prctica
del proyecto profesional, nos sorprende que los usuarios mantengan una percepcin tan
positiva sobre su situacin personal y familiar en conexin con la dimensin profesional.
Precisamente cuando en contraposicin con lo anterior, estos manifiestan elevadas
necesidades relacionadas con la autoexploracin, la toma de decisiones y la gestin del propio
proyecto profesional. Este hecho puede explicarse dado el desconocimiento que los usuarios
poseen sobre el concepto y la funcionalidad del proyecto profesional. Este hecho puede estar
impidiendo que los usuarios valoren con realismo las tareas implicadas en el proceso
orientador. Dado el momento de crisis laboral actual, esta falta de realidad sobre la propia
carrera tambin podra estar interactuando con el concepto que los usuarios tienen del proceso
orientador y de la labor de los servicios (Labour Asociados Consultores, 2005).
Estos primeros resultados apuntan a la necesidad de que los usuarios tomen conciencia
del proceso orientador, y especialmente con lo que supone implicarse en l y en las
actividades que desde los servicios se proponen para ello. Si estos datos los complementamos
con las opiniones de los usuarios sobre el proceso de orientacin seguido, puede concluirse
que los usuarios, en trminos generales, valoran positivamente el papel de los servicios de
orientacin, la accesibilidad a los mismos (cuando estos estn activos), y el horario de la
formacin/orientacin, y especialmente, la labor de los orientadores como mediadores en el
proceso de desempleo.
En general, los usuarios mantienen una actitud pasiva frente a la orientacin esperando
que el servicio ofrezca soluciones plausibles y rpidas a cada situacin personal; en
consonancia, sera necesario clarificar el sentido de estos programas y servicios, y dejar
patente que no son la panacea y que se requiere un papel activo por parte de la persona a fin
de dar sentido al propio proyecto profesional y vital. Todo ello es coincidente con el Proyecto
de I+D+I de Snchez Garca et al. (2003-2007), cuyos resultados ms relevantes ponen de
manifiesto, que el tipo de planificacin profesional que realizan los/as trabajadores/as tiene
lugar generalmente, no de una forma preventiva y anticipatoria, sino de forma esencialmente
reactiva, ante las situaciones y oportunidades que van surgiendo en la vida laboral. Estas
conclusiones nos llevan necesariamente a destacar la importancia de la dimensin personal
(autoexploracin) en orientacin profesional, insistiendo en la necesidad de fomentar el
aprendizaje de competencias clave que tienen que ver con la autoconfianza, la madurez
vocacional y la gestin emocional de la propia carrera (Snchez Garca et al., 2009). Estas
son claves para el xito de la carrera y la base para la elaboracin y gestin de proyectos
profesionales realistas y funcionales.
978-84-695-8363-0
520
Referencias
De la Fuente, R. y Gonzlez-Castro, J.L. (2009). Empleo, formacin e insercin de colectivos
en riesgo de exclusin. Un reto social y econmico para la empresa receptora. Bordn,
Revista de Pedagoga, 61, 33-45.
Garca del Dujo, A. y Martn, V. (2004). Perfil laboral y necesidades de formacin en
personas adultas en paro (30-45 aos): un estudio emprico. Revista de Educacin, 233,
297-318.
Labour Asociados Consultores (2005). Estudio de situacin y propuestas para el avance de
los servicios de orientacin profesional para el empleo. Madrid: Labour Asociados
Consultores.
Martnez Tuja, M. (1991). Perfil del orientador desde los problemas que tendr que resolver.
Bordn, 43, 2, 217-220.
Padilla Carmona, M.T. (1999). El desarrollo profesional en la edad adulta: Adaptacin y
validacin del Adult Career Concerns Inventory (ACCI) en la poblacin espaola.
Universidad de Sevilla. Tesis Doctoral.
Padilla Carmona, M.T. (2001). Estrategias para el diagnstico y la orientacin profesional de
personas adultas. Barcelona: Laertes.
Padilla Carmona, M.T., Garca Gmez, M.S. y Surez Ortega, M. (2005). Estudio
Exploratorio de las aspiraciones y expectativas educativas, profesionales y vitales de las
chicas que finalizan la escolaridad obligatoria. Plan Nacional de Investigacin
Cientfica, Desarrollo e Innovacin Tecnolgica del Ministerio de Trabajo y Asuntos
Sociales (B.O.E. n 24 de 24 de enero de 2003). Financiado por el Instituto de la Mujer.
Pea, D. (2002). Anlisis de datos multivariables. Madrid: McGraw-Hill.
Snchez Garca, M.F. (1998): Las funciones y necesidades de orientacin en la Universidad. Un
estudio comparativo sobre las opiniones de universitarios y profesionales. Revista de
Orientacin y Psicopedagoga, 9 (15), 87-107.
Snchez Garca, M.F., Surez Ortega, M., Manzano Soto, N., Oliveros Martn-Vars, L.,
Lozano Santiago, S., Fernndez DAndrea, B. y Malik Livano, B. (2011). Estereotipos
de gnero y valores sobre el trabajo entre los estudiantes espaoles. Revista de
Educacin, 355, 331-354.
Snchez Garca, M.F.; lvarez Gonzlez, B.; Manzano Soto, N. y Prez-Gonzlez, J.C.
(2009). Anlisis de las competencias del orientador profesional: Implicaciones para su
formacin. Revista Espaola de Orientacin y Psicopedagoga, 20 (3), 284-299.
Surez Ortega, M. (2008). El proyecto profesional y de vida de mujeres adultas con escasa
cualificacin. Un reto para la intervencin orientadora. Consejo Andaluz de Relaciones
Laborales, Junta de Andaluca. Sevilla: Mergablum.
978-84-695-8363-0
521
Resumen
Los objetivos de la presente investigacin son, por un lado, estudiar la relacin que existe
entre las aptitudes musicales e intelectuales y, por otro lado, analizar si existen diferencias en
funcin del sexo de los escolares de educacin primaria de la Regin de Murcia. Los
participantes son 932 estudiantes, 488 chicas y 444 chicos y sus edades se encuentran
comprendidas entre los 9 y 13 aos. Los instrumentos utilizados han sido, la batera de
actitudes diferenciales y generales (BADYG-E3), para evaluar el rea cognitiva y, el test de
aptitudes musicales de Seashore, para valorar las aptitudes musicales. Los resultados
muestran que las aptitudes musicales de los escolares se encuentran situadas por debajo del
percentil cincuenta. Destacan al discriminar ritmo y duracin. Existen diferencias
estadsticamente significativas entre los chicos y las chicas en discriminacin del tono,
discriminacin de diferencia, memoria visual, problemas numricos y series numricas.
Descriptores: aptitudes intelectual, aptitud musical, diagnstico.
Abstract
The aims of this study are, first, to study the relationship between music and intellectual skills
and, secondly, to analyze differences by gender of primary school children in the Region of
Murcia. There were a total of 932 participants, 488 girls and 444 boys, who were age
between 9 and 13. The instruments used have been the battery differential and general
attitudes (BADyG-E3), to establish the cognitive profiles and, the Seashore musical aptitude
test, by means of which we have assessed musical skills. The results show that the students
musical ability is below 50th percentile. Students excel at discriminating rhythm and duration.
The results indicate that there exist statistically significant differences between boys and girls
in tone discrimination, differences discrimination, visual memory, numerical problems and
numerical series.
Keywords: Intellectual skills, musical ability, evaluation and gender.
Introduccin
El concepto de aptitud viene del latn aptus cuyo significado es ser capaz, referido a
las capacidades que posee el ser humano. En trminos psicolgicos es la caracterstica
psicolgica por la cual se permite pronosticar las diferencias interindividuales en situaciones
978-84-695-8363-0
522
978-84-695-8363-0
523
978-84-695-8363-0
524
razonamiento lgico (r = .350, p < .01) y, la menos intensa con discriminacin de diferencias
(r = .222, p < .05). La variable timbre mostr la relacin ms intensa con inteligencia general
(r = .192, p < .01) y la menos intensa con memoria visual (r = .111, p < .05). En lo que a la
variable memoria se refiere, la relacin con inteligencia general es baja (r = .424, p < .01) y
extremadamente baja con memoria visual (r = .218, p < .01).
Tabla 1
Correlacin entre aptitudes musicales e intelectuales
Inteligencia general
Razonamiento Lgico
Analogas verbales
Series numricas
Matrices lgicas
Completar oraciones
Problemas numricos
Encajar figuras
Memoria relato oral
Memoria visual
Discriminacin
diferencias
Tono
.286**
.268**
.248**
180**
214**
.268**
.168**
.178**
.172**
.219**
.196**
Intensidad
.306**
.274**
.217**
.242**
.225**
.232**
.206**
.178**
158**
.200**
.176**
Ritmo
.413**
.385**
.338**
.315**
359**
.337**
.297**
.277**
.257**
.245**
.264**
Tiempo
.375**
.350**
.313**
.310**
.287**
.285**
.247**
.223**
.228**
.254**
.222**
Timbre
.192**
.171**
.153**
.125**
.126**
.153**
.146**
.134**
130**
.111**
.127**
Memoria
.424**
.399**
.365**
.287**
.347**
.358**
.274**
.293**
244**
.218**
.292**
Media
DT
Hombre
488
27,16
7,876
Mujer
444
27,12
7,234
Intensidad
Hombre
Mujer
488
444
31,90
31,93
6,882
7,379
Ritmo
Hombre
488
23,17
4,685
Mujer
444
23,15
4,457
Hombre
488
33,14
6,376
Mujer
444
32,11
6,518
Hombre
488
16,28
6,242
Mujer
444
16,29
6,126
Hombre
488
27,71
5,018
Mujer
444
27,48
4,807
Tono
Tiempo
Memoria
Timbre
978-84-695-8363-0
525
Tabla 3
Prueba T para muestras independientes segn sexo
Variables dependientes
gl
Tono
0,073
929
0,942
Intensidad
-0,084
929
0,933
Ritmo
0,085
929
0,933
Tiempo
2,429
930
0,015
Memoria
-0,024
930
0,981
Timbre
0,690
930
0,490
Inteligencia
General
Razonamiento
Lgico
Analogas
Verbales
Series
Numricas
Hombre
488
88,05
(31,886)
47,43
(17,789)
15,66
(8,391)
18,86
(9,262)
Mujer
444
87,92
(29,958)
47,33
(17,435)
16,27
(9,849)
17,17
(7,854)
Tabla 5
Aptitudes intelectuales en funcin del sexo
GRUPO
Matrices
Lgicas
Completar
Oraciones
Problemas
Numricos
Encajar Figuras
Masculino
488
14,95
(6,837)
16,09
(7,439)
12,39
(9,678)
13,83
(5,486)
Femenino
444
16,93
(8,324)
17,09
(8,900)
11,22
(8,806)
15,08
(8,190)
Tabla 6
Aptitudes intelectuales en funcin del sexo
GRUPO
Memoria
Relato Oral
Memoria Visual
Ortogrfica
Discriminacin de
Diferencias
Masculino
488
17,62
(7,927)
19,30
(8,506)
21,02
(5,318)
Femenino
444
16,66
(8,403)
21,49
(7,449)
22,75
(4,983)
978-84-695-8363-0
526
gl
Inteligencia general
0,065
0,948
Razonamiento Lgico
0,086
0,932
Analogas Verbales
-1,007
0,314
Series Numricas
3,012
0,003*
Matrices Lgicas
-3,976
0,000
Completar Oraciones
-1,866
0,062
Problemas Numricos
1,928
0,054*
Encajar Figuras
-2,769
0,006
1,797
0,073
-4,193
0,000*
Discriminacin de Diferencias
-5,100
0,000*
Discusin
De los resultados obtenidos se derivan las siguientes conclusiones:
En primer lugar, las aptitudes musicales estn relacionadas con las aptitudes
intelectuales. El nivel de relacin que manifiestan es positivo, significativo y de intensidad
baja. En segundo lugar, los chicos manifiestan puntuaciones en la discriminacin del tiempo
que se encuentran ligeramente por encima a la de las chicas. Algunas investigaciones Bell,
Weller y Waldrop (1971) y Kagan (1971) han encontrado diferentes patrones de percepcin
entre nios y nias. Otros estudios manifiestan que en general no existen diferencias
significativas entre los chicos y las chicas, como es el caso de las investigaciones realizadas
por Kwalwasser (1965) y Bentley (1966). En tercer lugar, existen diferencias estadsticamente
significativas entre chicos y chicas en series, problemas numricos y discriminacin de
diferencias. Los chicos manifiestan mayor capacidad para las habilidades matemticas.
Marco, Arnedo & Snchez (2012) en una de sus investigaciones sealan las diferencias de
sexo que muestra el cerebro masculino, el cual tiene ms habilidad en la manipulacin de
smbolos, campo relacionado con el razonamiento matemtico, obteniendo puntuaciones ms
altas en geometra, probabilidad, medida y estadstica, reflejando el uso de estrategias visoespaciales en estas reas. En cuarto y ltimo lugar, las chicas alcanzan puntuaciones
superiores a los chicos en memoria visual ortogrfica. Algunas investigaciones sostienen que
esto se debe a la lateralizacin de las funciones del lenguaje en los hombres y la
978-84-695-8363-0
527
978-84-695-8363-0
528
Resumen
Hasta fechas recientes, los estudiantes universitarios con algn tipo de discapacidad
necesitaban una serie de soportes que no les eran suministrados. Con el paso del tiempo, el
sistema educativo universitario comenz a comprometerse con la atencin a los estudiantes
con discapacidad que requeran de determinadas ayudas para acceder, cursar y finalizar sus
estudios con xito. La ley que se ocupa de regular la ayuda que necesita el alumnado
universitario con alguna discapacidad es la LOU (2001), Ley Orgnica de Universidades.
Desde que la LOU entrara en vigencia, en prcticamente todas las universidades espaolas
se han creado servicios de atencin al alumno con discapacidad. El propsito de este estudio
es conocer la tasa de alumnado con discapacidad que cursaba sus estudios en la Universidad
de Alicante en el curso 2010-2011, as como las lneas de actuacin trazadas por la
Universidad, y el grado de satisfaccin del alumnado.
Descriptores: estudiantes, discapacidad, Universidad, Espanya.
Abstract
Until recently, students with disabilities needed a series of supports that were not provided to
them. With the passage of time, the University educational system began to engage with the
attention the students with disabilities requiring certain AIDS to access, study and complete
their studies successfully. The law dealing with regulating the help you need for university
students with disabilities is the LOU (2001), organic law of universities. Since the LOU came
into force, in practically all Spanish universities have created services to students with
disabilities. The purpose of this study was to know the rate of pupils with disabilities who was
studying at the University of Alicante in the academic year 2010-2011, the lines of action
established by the University, as well as the degree of satisfaction of them.
Keywords: students, disabilities, University, Spain.
Introduccin
En la Declaracin Mundial sobre Educacin para Todos (UNESCO, 1990) celebrada
en Jomtien, Tailandia, se afirm que toda persona tena derecho a la educacin; sin embargo,
a pesar de los importantes esfuerzos realizados para asegurar el derecho a la educacin para
todos, persistan realidades que evidenciaban que no era as. Por lo tanto, reconociendo la
necesidad de dar a las generaciones presentes y venideras una educacin bsica para todos, se
proclam la Declaracin, en cuyo art. 3 hace referencia a las necesidades bsicas de
978-84-695-8363-0
529
aprendizaje de las personas con discapacidad que necesitaban una atencin especial, es decir
era preciso tomar medidas para facilitar a las personas con alguna necesidad especial el
acceso a la educacin en igualdad de condiciones que el resto para poder ser parte integrante
del sistema educativo. En 1994, representantes de 92 gobiernos y 25 organizaciones
internacionales se reunieron en Salamanca, Espaa, del 7 al 10 de junio de 1994, a fin de
promover el objetivo de la Educacin para Todos. De esta reunin naci la Declaracin de
Salamanca (UNESCO, 1994), basada en el principio de integracin y en el reconocimiento de
la necesidad de actuar con miras a conseguir "escuelas para todos", represent la aprobacin
de una serie de principios, de una poltica y de una prctica para las necesidades educativas
especiales, as como, de un marco de accin ms progresivo que la anterior Declaracin de
Jomtien (UNESCO, 1990). En el ao 2000, tuvo lugar en Senegal, entre el 26 y el 28 de abril,
el Foro Mundial de Educacin. Estas y otras declaraciones posteriores sirvieron, entre otras
cosas, para concienciar a los estados de que el acceso a la educacin de todos,
independientemente de las caractersticas de cada persona, era una necesidad de primer orden
y que tenan que adaptar su legislacin para garantizar el acceso y la calidad de la educacin a
todos. En Espaa las leyes que han tratado de incorporar tales principios son la LISMI (1982);
y la LOGSE (1990), la LOCE (2002) y la LOE (2006), en el sistema educativo espaol no
universitario. Sin embargo, en el contexto universitario los estudiantes con algn tipo de
discapacidad han estado prcticamente desatendidos, ya que necesitaban una serie de soportes
que no les eran suministrados.
Diversos autores han puesto nfasis en la importancia de que el alumnado con
discapacidad debe recibir la atencin necesaria para poder finalizar sus estudios universitarios
con el mayor xito posible. Por ejemplo, Daz Snchez (2000) afirmaba que el sistema
universitario era el ms segregador y excluyente de todos, en lo que respecta a la integracin
de alumnos/as con algn tipo de deficiencia o minusvala, no ocurriendo lo mismo en niveles
no universitarios. Por otra parte, Granados Martnez (2000) entenda que la universidad estaba
llamada a desempear un papel decisivo para asegurar el principio de igualdad de
oportunidades, proporcionando a los estudiantes los recursos disponibles para poder usarlos
como el resto de alumnado.
Con el paso del tiempo, el sistema educativo universitario comenz a comprometerse
con la atencin a los estudiantes con discapacidad que requeran de determinadas ayudas para
acceder, cursar y finalizar sus estudios con xito. La ley que se ha ocupado de regular la
ayuda que necesita el alumnado universitario con alguna discapacidad es la LOU (2001), Ley
Orgnica de Universidades, que en su Ttulo VIII, y ms concretamente en el art. 43.2, dice
textualmente que Los poderes pblicos desarrollarn, en el marco de la programacin
general de la enseanza universitaria, una poltica de inversiones tendente a adecuar la
capacidad de los centros a la demanda social, teniendo en cuenta el gasto pblico disponible,
la previsin de las necesidades de la sociedad y la compensacin de los desajustes
territoriales. As mismo, el art. 46.2 de la LOU destaca el principio de La igualdad de
oportunidades y no discriminacin, por circunstancias personales o sociales, incluida la
discapacidad, en el acceso a la universidad, ingreso en los centros, permanencia en la
Universidad y ejercicio de sus derechos acadmicos, que debe prevalecer en la educacin de
todos los estudiantes. As mismo, la LOU, en su modificacin de 2007, reconoce en su art.
46, y ms concretamente, en el prrafo b) del apartado 2, que la educacin de estas personas
ha de guiarse por el principio de igualdad de oportunidades y no discriminacin por razones
de sexo, raza, religin o discapacidad o cualquier otra condicin o circunstancia personal o
social en el acceso a la universidad, ingreso en los centros, permanencia en la universidad y
ejercicio de sus derechos acadmicos. Desde que la LOU entrara en vigencia, en
978-84-695-8363-0
530
prcticamente todas las universidades espaolas se han creado servicios de atencin al alumno
con discapacidad. No obstante, aunque se sabe que se ha avanzado mucho en la provisin de
estos servicios, los profesionales de los servicios de apoyo a estudiantes con discapacidad, as
como el propio alumnado con discapacidad tienen la percepcin de que los servicios y apoyos
que reciben pueden mejorar. Entre las universidades espaolas que tienen servicios de apoyo
para sus estudiantes con algn tipo de discapacidad se encuentra la Universidad Nacional de
Educacin a Distancia (UNED), la Universidad de Zaragoza y la Universidad de Burgos. La
Universidad de Alicante, para dar respuesta a las necesidades de los alumnos universitarios
matriculados con algn tipo de discapacidad, cre en el curso 1997/1998 el Secretariado de
Servicios Asistenciales, cuya funcin era la gestin de la Oficina de la Prestacin Social
Sustitutoria, la orientacin a asociaciones de estudiantes universitarios y a alumnos en
situaciones de emergencia y, por ltimo, la de apoyo a alumnos con discapacidad. En el curso
1998/1999 este Secretariado pas a denominarse Secretariado de Asuntos Sociales y en el
curso 1999/2000 empez a denominarse Centro de Apoyo al Estudiante (de ahora en adelante
CAE), su actual denominacin. El CAE, que formaba parte del Secretariado de Prcticas
Empresa y Apoyo al Estudiante, dependiente del Vicerrectorado de Alumnado, tiene como
objetivo facilitar una amplia gama de ayudas relacionadas directamente con la vida acadmica
del alumno/a, como por ejemplo, las ayudas para responder a sus necesidades psicolgicas,
psicoeducativas, socioeconmicas o derivadas de alguna discapacidad fsica o sensorial. As
mismo los profesores pueden encontrar en el CAE el apoyo e indicaciones tiles y necesarias
para adecuar su docencia al alumno con discapacidad, como son los principios y normas de
obligado cumplimiento, las guas de trato de personas con discapacidad y las adaptaciones
ms comunes de acceso al currculum. Desde el CAE se participa activamente en acciones
encaminadas hacia la accesibilidad al medio fsico y a la comunicacin desde la perspectiva
del diseo para todos, as mismo, se trabaja en red con entidades internas y externas a la
Universidad de Alicante para el mejor funcionamiento de los programas que desarrollan. Sin
embargo, hay que tener en cuenta que para que el CAE pueda dar una respuesta adecuada a
los alumnos con discapacidad que demandan sus servicios tiene que partir de un conocimiento
de las necesidades reales de estos estudiantes para ajustar los servicios que ofrecen a la
realidad de cada uno. Anlisis o estudios de esta naturaleza no consta que se hayan realizado
hasta el momento en la Universidad de Alicante, por lo tanto, el propsito de este estudio fue
conocer la tasa de alumnado con discapacidad que cursaba sus estudios en la Universidad de
Alicante durante el curso 2010-2011, as como las lneas de actuacin trazadas por la
Universidad para la atencin a la diversidad de este alumnado. Ms especficamente, se
pretenda conocer: (1) El nmero de estudiantes universitarios con discapacidad matriculados
en la Universidad de Alicante durante el curso 2010/2011 y que eran usuarios del CAE. (2) Su
distribucin por tipo de discapacidad. (3) Su distribucin por gnero. (4) El tipo de servicios
que demandaban estos estudiantes del CAE y su grado de satisfaccin. (5) El tipo de servicios
que ofreca el CAE a los estudiantes con discapacidad.
Mtodo
El enfoque de investigacin utilizado en este estudio fue primordialmente de carcter
cuantitativo, dado que lo que se pretenda era conocer la tasa de alumnos con discapacidad
usuarios del CAE, matriculados en la Universidad de Alicante en el curso 2010/2011, as
como su distribucin por tipo de discapacidad y gnero.
978-84-695-8363-0
531
Diseo de investigacin
Para este estudio de investigacin se utiliz un diseo no experimental descriptivo que
se complement con informacin de carcter cualitativo obtenida de la entrevista a los
tcnicos del CAE.
Contexto y participantes
El CAE, situado en la planta baja del edificio de Ciencias Sociales en la Universidad
de Alicante, est a disposicin de cualquier miembro de la comunidad educativa universitaria
se puede poner en contacto con este servicio telefnicamente o a travs de su correo que es el
siguiente: [email protected]. Este servicio est formado por un equipo interdisciplinar
orientado a ayudar a que los alumnos universitarios, entre ellos los alumnos con algn tipo de
discapacidad, encuentren los servicios y los apoyos que necesitan. Este equipo est formado
por un director, cinco tcnicos (tres trabajadoras sociales y dos psiclogos), tres
administrativas, y dos becarios. La Universidad de Alicante, tena matriculados durante el
curso 2010/2011, 31.321 alumnos, de los que 294 eran estudiantes con discapacidad (0,93%
del total de alumnos matriculados) y de ellos 216 solicitaron los servicios del CAE (es decir,
el 0,68% del total de alumnos con discapacidad matriculados durante este curso). Estos
estudiantes cursaban sus estudios en los diferentes centros de la Universidad de Alicante,
como son la Facultad de Econmicas y Ciencias Empresariales, Facultad de Derecho,
Facultad de Ciencias, Facultad de Ciencias de la Salud, Facultad de Filosofa y Letras y la
Facultad de Educacin y con la Escuela Politcnica Superior. Los participantes en el estudio
fueron los cinco tcnicos del CAE y tres alumnos con discapacidad usuarios de este servicio
durante el curso 2010/2011. Las edades de los cinco tcnicos del CAE oscilaban entre los 3550 aos, que repartidos por gnero, fueron entrevistados tres mujeres (trabajadoras sociales)
y dos hombres (psiclogos). Los aos que llevaban desarrollando su labor en el CAE,
oscilaban entre los 3,5 y los 12 aos (cuatro tcnicos, 2 hombres y 2 mujeres, llevaban
prestando sus servicios 12 aos, mientras que el otro tcnico (una mujer) llevaba 3,5 aos). En
cuanto a los estudiantes universitarios con discapacidad, los participantes fueron dos alumnas
y un alumno con discapacidad motora y de edades comprendidas entre los 21 aos y los 35
aos, cursando estudios de Trabajo Social, Filologa Inglesa y Filologa Hispnica
respectivamente.
Variables y procedimiento
Las variables de inters fueron las siguientes: el nmero de estudiantes con
discapacidad que estuvieron matriculados en la Universidad de Alicante durante el curso
2010/2011 y que fueron usuarios del CAE, el tipo de discapacidad que padecan, su
distribucin por gnero, el tipo de servicios que demandaron al CAE y su grado de
satisfaccin y, en ltimo lugar, el tipo de servicios que les ofert el CAE. Para acceder a la
informacin se sigui el siguiente procedimiento: Primero, se visit la web de la Universidad
de Alicante para examinar las memorias que haban sido publicadas, as como la web del
CAE para posteriormente completar los datos obtenidos a travs de la entrevista a los tcnicos
del CAE. En segundo lugar, se habl con el director del CAE para explicarle en qu consista
el estudio. A continuacin, se le solicit permiso para poder recabar la informacin necesaria,
ya que haba que obtener informacin de los tcnicos del CAE acerca de los alumnos con
discapacidad usuarios de sus servicios. En tercer lugar, se contact con los tcnicos del CAE
y se concert una cita con ellos para realizar la entrevista, para la se elaboraron las siguientes
preguntas: Cuntos alumnos con discapacidad, matriculados en la UA durante el curso
978-84-695-8363-0
532
2010/2011 fueron usuarios del CAE? Qu tipos de discapacidades padecan? Cmo estaban
repartidos por gnero? Qu tipo de servicios demandaron estos alumnos al CAE? Qu tipo
de servicios ofreci el CAE al alumnado con discapacidad? En cuarto lugar, se entrevist a
los tres estudiantes participantes para conocer qu servicios solicitaron del CAE y su grado de
satisfaccin. Para esta entrevista se elaboraron las siguientes preguntas: Estudios que
realizaba. Servicios solicitados al CAE. Tipo de adaptaciones solicitadas para realizar los
estudios. Adaptaciones de exmenes y del tiempo para solicitados. Apoyo por parte del
profesorado. Grado de satisfaccin con los servicios recibidos del CAE. Propuestas de
mejoras en los servicios ofertados por el CAE. La recogida de los datos numricos se realiz a
partir de las estadsticas del CAE, durante el mes de marzo de 2011. Por otro lado, las
entrevistas con los tcnicos del CAE tuvieron lugar durante el mes de marzo y abril de 2011
y su duracin fue de una hora por entrevista. Por ltimo, las entrevistas con el alumnado
participante tuvieron lugar durante el mes de junio y su duracin fue asimismo de una hora
por entrevista. El resto de los datos se recogieron de la web de la Universidad de Alicante
entre los meses de marzo y mayo.
Anlisis de datos
El anlisis de datos consisti en el clculo de frecuencias y porcentajes de los datos
numricos, as como del anlisis del contenido de las respuestas de los tcnicos y de los
alumnos en las entrevistas, las cuales se organizaron por categoras y dentro de stas por
temas.
Resultados
Los resultados del estudio se presentan organizados por objetivos de investigacin.
Alumnado con discapacidad usuarios del CAE
El nmero de estudiantes con discapacidad matriculados en la Universidad de Alicante
que fueron usuarios del CAE el curso 2010/2011 ascendi a 216, representando el 73% del
total de alumnos con discapacidad matriculados en la Universidad de Alicante. Esta cifra se
considera teniendo en cuenta que el total de alumnos con discapacidad matriculados durante
el curso 2010/2011 fue de 294 alumnos.
Distribucin del alumnado por tipo de discapacidad
La distribucin de los estudiantes por tipo de discapacidad fue de 22 estudiantes con
discapacidad visual (10%), 26 con discapacidad auditiva (12%), 70 con discapacidad motora
(32%), 31 con discapacidad mental (14%) y 67 con problemas de salud (31%).
Distribucin por gnero
La distribucin por gnero fue la siguiente. De los 22 estudiantes con discapacidad
visual, 14 fueron alumnos (64%) y 8 fueron alumnas (36%). De los 26 alumnos con
discapacidad auditiva, 14 fueron alumnos (54%) y 12 fueron alumnas (46%). De los 70
alumnos con discapacidad motora, 32 fueron alumnos (45%) y 38 fueron alumnas (54%). De
los 31 alumnos con discapacidad mental o psquica, 17 eran alumnos (55%) y 14 eran
alumnas (45%). De los 67 alumnos con problemas de salud, 19 eran alumnos (28%) y 48 eran
alumnas (72%).
978-84-695-8363-0
533
978-84-695-8363-0
534
Discusin y Conclusiones
Tras el estudio se pudo comprobar que slo 216 alumnos universitarios con
discapacidad, solicitaron los servicios del CAE, durante el curso 2010/2011; sin embargo, el
nmero total de alumnado con algn tipo de discapacidad matriculado en la Universidad de
Alicante durante este curso 2010/2011 fue de 294 alumnos, de los que 78 de ellos no solicit
los servicios del CAE. Por otra parte, los 216 alumnos representaron el 73% de los 294
alumnos universitarios matriculados en la UA, el curso 2010-2011 y los 294 alumnos con
discapacidad representaron el 0.93% del total del alumnado matriculado en la UA durante el
curso 2010/2011 que ascendi a 31.321 alumnos. Por discapacidades, la que ms alumnos
abarc fue la discapacidad motora con 70 alumnos (0.32%), y la que menos la discapacidad
visual con 22 alumnos (0.10%). En cuanto a su distribucin por gnero los alumnos con
discapacidad matriculados en la UA durante el curso 2010-2011, que fueron usuarios del
CAE, fue 96 varones (44%) frente a 120 mujeres (56%). Repartidos estos alumnos por
gnero, dentro de cada discapacidad, se observ que la que mayor nmero de mujeres
abarcaba era la discapacidad por problemas de salud con 48 alumnas (72%), y la que menor
nmero abarcaba era la discapacidad visual con 8 alumnas (36%). Por otro lado, la que mayor
nmero de varones abarcaba era la discapacidad motora con 32 alumnos (45%), y las que
menos fueron la discapacidad visual con 14 alumnos (64%) y la discapacidad auditiva con 14
alumnos (54%). Comparando las diferentes discapacidades y gnero, encontramos que en la
discapacidad visual (14), la discapacidad auditiva (14) y la discapacidad mental (17), haba
ms varones que mujeres; y en la discapacidad motora (38) y en la discapacidad por
problemas de salud (48), haba ms mujeres que varones. En general, a la conclusin que se
lleg fue la siguiente: el alumnado con discapacidad que solicit los servicios del CAE estaba
contento con los servicios recibidos, datos, por otro lado, avalados por los indicadores de
calidad que hace la UA, as como continuar con el progreso de los servicios. Estos datos
demostraron que el CAE es un servicio muy competente, formado por un equipo humano que
se preocupa por desarrollar su labor lo mejor posible, ofreciendo sus servicios a todo alumno,
con o sin discapacidad, que demande sus servicios. Sin embargo, se cree conveniente recabar
ms informacin proveniente alumnado con discapacidad que han sido usuarios de este
servicio para poder contrastar los datos aportados por los alumnos entrevistados y por los
controles de calidad de la UA. Por otro lado, se cree conveniente ofrecer ms informacin de
este servicio a toda la comunidad educativa, ya que, muchsimos alumnos terminan sus
estudios sin conocer la existencia del CAE.
Referencias
Daz Snchez, F. A. (2000). Importancia de la orientacin educativa en la atencin a la
diversidad de alumnos/as con necesidades educativas especiales. Narracin de
experiencias. En V. Salmern & V. L. Lpez (Coords.), Orientacin Educativa en la
Universidades. Granada: Grupo Editorial Universitario.
Granados Martnez, A. (2000). Tiene cabida la diversidad en la Universidad? En V.
Salmern & V. L. Lpez (Coords.), Orientacin Educativa en la Universidades.
Granada: Grupo Editorial Universitario.
LISMI, (1982) Ley 1311982; de 1 de abril, de integracin social de los minusvlidos. BOE,
103, 30/04/1982.
978-84-695-8363-0
535
978-84-695-8363-0
536
Resumen
En este trabajo presentamos una prueba para detectar las dificultades en expresin escrita en
escolares de segundo curso de Educacin Primaria (EXE2), atendiendo tanto al contenido
como a algunos aspectos superficiales (exactitud ortogrfica bsica, uniones y
fragmentaciones de palabras y calidad de la letra). Dicha prueba forma parte de una batera
de instrumentos ms amplia, en castellano y gallego, que tiene como objetivo evaluar el
rendimiento en lectura y escritura al inicio de ese curso acadmico. Se describe el marco
terico de partida, el proceso seguido para la elaboracin de la misma, sus principales
caractersticas y algunos resultados obtenidos. Se constata que ms del 30% de los escolares
tienen dificultades en las reas evaluadas.
Descriptores: Expresin escrita, evaluacin de la escritura, dificultades en escritura.
Abstract
In this essay we present a test to detect writing difficulties in pupils in the second year of
primary school education (EXE2), attending both content and superficial aspects (basic
spelling accuracy, unions and fragmentation of words and letter quality). This test is part of a
larger battery of instruments, in Spanish and in Galician, which aim is to evaluate the
performance in the reading and writing skills at the beginning of the coming academic year.
We describe the starting theoretical framework, the process for preparing the same, its main
characteristics and some of the obtained results. It is noticed that more than 30% of the
students have difficulties in the assessed areas.
Keywords: Writing, writing assessment, writing difficulties.
Introduccin
Escribir es una palabra de uso comn, que asociamos a eventos y prcticas cotidianas.
Esta palabra de uso comn (y el concepto representado por ella) se presta a que sea
interpretada de modo muy distinto por diferentes personas. Y llegan a ser interpretaciones
muy arraigadas, lo que hace difcil su modificacin. Pero las concepciones bsicas de escribir
tienen consecuencias prcticas: a la hora de ensear a escribir, a la hora de enjuiciar
composiciones escritas, a la hora de construir instrumentos de evaluacin, etc. Escribir es una
palabra ambigua, como dice Barton (1994), que se refiere, por un lado, a la autora del texto y,
por otro, al hecho de ser escribiente. Para nosotros, escribir consiste en producir textos
978-84-695-8363-0
537
impresos con propsitos predominantes muy variados: el propio placer de escribir, expresarse,
informar, entretener, ayudar a la propia memoria, crear belleza, convencer, exponer opiniones,
dar instrucciones de cmo realizar actividades, analizar, aprender Con estos propsitos se
asocian textos muy distintos (cortos-extensos, continuos-discontinuos, monomodalesmultimedia, de diferentes tipos y gneros). Cada vez se le est dando ms importancia a
escribir para aprender (para aprender a pensar crticamente, en particular), es decir, a la
funcin epistmica de escribir (Bjrk & Blomstrand, 2000; Indrisano & Paratore, 2005).
Saber escribir se considera incluso una competencia necesaria para poder participar
democrticamente en la sociedad de hoy. En este prueba privilegiamos la etiqueta expresin
escrita, para resaltar la importancia relativa de la funcin expresiva en el primer ciclo de
Educacin Primaria (frente a otras funciones: comunicativa, epistmica, etc.).
Escribir es, como la lectura, una actividad muy compleja, tanto que la composicin
escrita es considerada por Scardamalia y Bereiter (1992) la tarea constructiva ms compleja
que se espera que realice el mayor nmero de seres humanos en alguna ocasin. Desde luego,
no se puede reducir a codificar correctamente, esto es, a no cometer faltas de ortografa,
aunque una exactitud ortogrfica bsica, consistente en el dominio de las correspondencias
fonema-grafa regidas por reglas sencillas, es uno de los componentes de escribir a los que
hay que prestar especial atencin en el primer ciclo de Educacin Primaria. Tampoco se
puede reducir a escribir con una buena letra, aunque tambin se espera que el escolar sea
capaz de hacerlo con una letra legible y fcil de realizar.
Existen escolares que, afortunadamente, adquieren sin gran dificultad una buena
competencia escritora, pero tambin existen otros que finalizan el primer ciclo de Educacin
Primaria sin ser capaces de escribir un texto con voz propia y clara, con un dominio de la
ortografa bsica y con una letra legible, encontrndose en una situacin de desventaja
respecto a sus compaeros. Sus dificultades de expresin escrita no les permitirn
beneficiarse de las funciones epistmica (para la construccin del conocimiento),
comunicativa, expresiva y otras, que desempea la escritura a lo largo del currculo. Pero no
slo eso, sus continuos fracasos con la escritura les llevan a experimentar altos niveles de
ansiedad y frustracin ante las tareas de escribir, que con el tiempo desencadenan problemas
emocionales y conductuales. Por otra parte, la recuperacin de estas habilidades cada vez les
va a resultar ms difcil, puesto que los profesores de cursos posteriores tendern a pensar que
tal tarea no es de su incumbencia, tendrn otras prioridades curriculares, carecern de
experiencia suficiente para ayudar con xito a estos escolares, etc. La evaluacin diagnstica
prevista en la LOE para 4 curso de Educacin Primaria llega demasiado tarde, cuando el
dao est ya hecho.
El propsito de nuestra investigacin fue disear dos tipos de pruebas en castellano y
gallego para contribuir a que disminuya lo ms posible el nmero de escolares que abandonan
el primer ciclo de Educacin Primaria sin un dominio en lenguaje escrito adecuado a su edad.
Por un lado, se han construido pruebas de cribado (screening) de comprensin lectora y
composicin escrita, para la deteccin de escolares que al inicio de 2 curso de Educacin
Primaria presentan dificultades en estos dominios y, por otro, pruebas diagnsticas de
exactitud y velocidad lectoras, para el estudio de aquellos escolares identificados con
dificultades en las pruebas de cribado. Dadas las limitaciones de espacio, en este trabajo
vamos a presentar slo la prueba construida para averiguar las dificultades de expresin
escrita en castellano (EXE2).
978-84-695-8363-0
538
Mtodo
Sujetos
La muestra de tipificacin de EXE2 estuvo formada por 479 escolares de ambos sexos
(un 47,8% eran nias y un 52,2% nios), cuyas edades variaban entre los 6 aos y 9 meses y
los 7 aos y 9 meses. Todos eran alumnos que iniciaban segundo de Educacin Primaria en
22 centros educativos de la Comunidad Autnoma de Galicia. Estos alumnos pertenecan a
los principales tipos de centros que existen en esta comunidad (pblico rural, pblico de villa,
pblico urbano, privado de villa y privado urbano). La Tabla 1 resume las caractersticas de la
muestra en funcin del tipo de centro.
Tabla 7
Muestras de escolares a los que se aplic la prueba EXE2
EXE2
Pblicos
Privados
Totales
Rurales
146
0
146
De Villas
81
50
131
Urbanos
119
83
202
Totales
346
133
479
Instrumento
En el contexto del proyecto de investigacin Batera de evaluacin de la competencia
en lenguaje escrito en gallego y castellano28, se construy una prueba de evaluacin de la
expresin escrita en castellano (EXE2) para detectar al inicio de 2 de Educacin Primaria a
los escolares que tuvieran dificultades en la escritura, tanto en contenido como en algunos
aspectos superficiales (exactitud ortogrfica bsica, uniones y fragmentaciones de palabras y
calidad de la letra). La prueba consiste en una tarea de escritura manual provocada, en la que
los nios ante un texto narrativo incompleto y presentado en forma grfica (por cuatro
vietas, de las cuales la ltima es un interrogante) tienen que completar y contar verbalmente
por escrito. El hecho de que se les presente a todos los alumnos el mismo estmulo permite
comparar unas composiciones con otras. Esto es necesario ya que no existen unas normas
claras del nivel de ejecucin que cabe esperar de los escolares, mxime con los cambios que
ha significado la universalizacin de la Educacin Infantil en la iniciacin de la lectura y
escritura. El texto narrativo quiz sea el tipo de texto con el que estn ms familiarizados los
nios y nias de esta edad. La situacin presentada es suficientemente abierta para que puedan
poner de manifiesto una amplia gama de capacidades escritoras (conocimientos de la lengua
sintaxis, lxico, coherencia, cohesin, dominio de los aspectos mecnicos, creatividad,
etc.).
Procedimiento
La prueba fue administrada por tres personas contratadas y entrenadas al efecto,
despus de algunas aplicaciones piloto a pequea escala y la aplicacin experimental. Este
personal contratado tena el ttulo de maestro/a y el de Pedagoga o Psicopedagoga, adems
de experiencia docente. La administracin de la prueba se llev a cabo en la primera sesin de
la maana en el mes de octubre, una vez que se recobr el ritmo normal de clase, despus de
las largas vacaciones estivales. Antes de esta prueba se administr la prueba COLE2 (Prueba
de cribado de comprensin lectora en castellano para 2 de Educacin Primaria) del proyecto
28 Proyecto de investigacin PGIDT/PGIDIT (07SEC015214PR) Batera de evaluacin de la competencia en
lenguaje escrito en gallego y castellano, subvencionado por la Xunta de Galicia y fondos FEDER.
978-84-695-8363-0
539
978-84-695-8363-0
540
aspectos dado el propsito global del proyecto y las consecuencias negativas que las
deficiencias en ellos acarrean para la trayectoria del escolar. Pero en modo alguno queremos
sugerir que estos deben ser los nicos objetivos que deben perseguirse en esta edad en
relacin con la expresin escrita.
Exactitud ortogrfica bsica (EOB). Dominio de las correspondencias del sistema
fonolgico del castellano con las grafas del abecedario de esta lengua (RAE, 1999) a
un nivel tal que no impida seriamente la comprensin del mensaje. Incluye omisiones,
sustituciones, adiciones e inversiones. En modo alguno debe interpretarse como que
no damos importancia a otros aspectos de la ortografa (la llamada ortografa
arbitraria, uso de maysculas y tildes, etc.) Es una cuestin de priorizacin, lo que
nos parece de la mxima importancia.
Uniones y fragmentaciones (U&F). Para determinar si una composicin presenta o no
dificultades en este aspecto (selodije, es cursin), tuvimos en cuenta la tasa de
errores.
Calidad de la letra (LTR). El criterio bsico ser si el texto es legible y,
secundariamente, la economa de su formacin (repaso de letras, uniones aadidas
entre letras para darle la apariencia de letra enlazada, uso excesivo de goma para
corregir fallos) o algn rasgo sistemtico que llame la atencin y merezca ser
corregido antes de que se cristalice (tamao de la letra excesivamente grande o
pequeo, una ubicacin extraa del texto en el papel, mezcla aleatoria de maysculas
y minsculas).
As pues, al tener en cuenta tanto el contenido como los aspectos superficiales, las
composiciones de cada escolar fueron clasificadas en las categoras de la Tabla 2. De tal
forma, que cuando una composicin presentaba una o ms dificultades superficiales, se
aadan los nmeros correspondientes despus de la letra identificadora del nivel de
contenido. Por ejemplo, una composicin valorada en contenido como narracin incipiente y
con dificultades superficiales fue cualificada como I1 si solo tena dificultades en EOB; I2 si
solo tena dificultades en U&F; I3 si solo tena dificultades en LTR; I12 si tena dificultades
en EOB y en U&B; I123 si tena dificultades en EOB, U&F y LTR.
Tabla 8
Esquema para la puntuacin de las composiciones
DIFICULTADES SUPERFICIALES
S
CONT
ENIDO
No
Sin dificultades
Con dificultades
No evaluado
EOB (1)
U&F (2)
LETRA (3)
Elaborado
Bsico
Incipiente
Aisladas
NEC
978-84-695-8363-0
541
6.9
28.3
56.5
8.4
Porcentaje
acumulado
6.9
35.1
91.6
100
978-84-695-8363-0
542
Tabla 10
Puntuaciones de las composiciones en aspectos superficiales
EOB
U&F
LETRA
Con
Dud.
Sin
Con
Dud.
Sin
Con
Dud.
Sin
Porcentaje
21.9
14.1
64
31.8
6.9
61.3
19.6
18.3
62.1
Porcentaje acumulado
21.9
36
100
31.8
38.7
100
19.6
37.9
100
978-84-695-8363-0
543
Referencias
Barton, D. (1994). Literacy. An Introduction to the Ecology of Written Language. Oxford:
Blackwell.
Bjrk, L. & Blomstrand, I. (2000). La escritura en la enseanza secundaria. Los procesos del
pensar y del escribir. Barcelona: Gra.
Fulcher, G. & Davidson, F. (2007). Language Testing and Assessment. London: Routledge.
Gonzlez, B. & Surez, A. (2011). Probas de expresin escrita en galego e casteln para
escolares que comezan segundo de educacin primaria. Revista Galega do Ensino, 62.
Indrisano, R. & Paratore, J. R. (2005). Learning to Write. Writing to Learn. Theory and
Research in Practice. Newark, DE: I.R.A.
Maruny, Ll., Ministral, M. & Miralles, M. (1995). Escribir y Leer. Materiales curriculares
para la enseanza y el aprendizaje del lenguaje escrito, de tres a ocho aos, I-II-III.
Madrid: MEC/Edelvives.
Outn, P. (2004). Programas de intervencin con dislxicos. Madrid: CEPE.
Outn, P., Rubio, A. & Surez, A. (2011). Probas de comprensin lectora para escolares de
segundo de primaria. Revista Galega do Ensino, 61.
Outn, P. & Surez, A. (2011). Las dificultades de exactitud y velocidad lectoras en escolares
de segundo de Educacin Primaria. Revista de Investigacin en Educacin, 9, 153-161.
RAE (1999). Ortografa de la lengua espaola. Madrid: RAE/Espasa.
Scardamalia, M. & Bereiter, K. (1992). Dos modelos explicativos de los procesos de
composicin escrita. Infancia y Aprendizaje, 58, 43-64.
Surez, A. (1995). Dificultades en el aprendizaje. Un modelo de diagnstico e intervencin.
Madrid: Santillana.
Surez, A., Rubal, X., Outn, P., Rubio, A., Vila, E. & Gonzlez, B. (2012). Probas de
cribado da linguaxe escrita para 2 de Educacin Primaria. Santiago de Compostela:
Andavira.
Surez, A., Rubal, X., Outn, P., Rubio, A., Vila, E. & Gonzlez, B. (2012). Pruebas de
cribado de lenguaje escrito para 2 de Educacin Primaria. Santiago de Compostela:
Andavira
Thorndyke, P. W. (1977). Cognitive Structures and Memory of Narrative Discourse.
Cognitive Psychology, 9, 77-110.
978-84-695-8363-0
544
Introduccin
La educacin Costarricense, se divide en Educacin General Bsica, en Tercer y
Cuarto Ciclo y finalmente Educacin Formal, Parauniversitaria, y Tcnica. El presente
estudio corresponde a una investigacin realizada en el mbito universitario, enfocado en
Educacin Formal con el fin de identificar la actitud en una muestra del personal docente que
labora en este campo, hacia las personas con discapacidad, especficamente en la Universidad
de Costa Rica (UCR), en la Sede Rodrigo Facio durante los aos 2010 y 2011.
Dicho estudio, nace del Estudio Macro, y una rplica de los estudios realizados por
Soto (1997, 2007) al cual le llam Actitud de los docentes de la Universidad de Costa Rica
hacia los y las estudiantes con discapacidad, y Miranda (2009), Tesis presentada en la UCR
llamada: Actitud del personal acadmico universitario hacia el estudiantado con
discapacidad, y su relacin con el desempeo acadmico: Un estudio en la Universidad
Nacional, con ello, se utiliza el mismo anlisis de muestra correspondiente a la presentacin
del proyecto macro con el personal docente inscrito en el 2008.
El proceso de medicin de actitud hacia el estudiantado con discapacidad, se identifica
por medio de tres factores o componentes; cognitivo, conductual y afectivo que conforman la
actitud, la cual se identifican a partir de la aplicacin de cuatro cuestionarios, al personal
docente participante.
Con este estudio, se pretendi comprender el modelo de Universidad para todos, aquel
que contempla la posibilidad de una educacin integrada, un modelo abierto a la diversidad
que reconozca que cada estudiante es diferente, tiene necesidades e intereses particulares y
progresa de acuerdo a sus posibilidades. Es un modelo de Universidad que permita la
promocin humana de las personas, que favorezca el desarrollo humano y no slo el
desarrollo intelectual, que cierre brechas sociales y que logra la integracin de todos los
ciudadanos (Cordero, 2004, p. 29), pero sobre todo, es aquella institucin en la cual la
diversidad debe ser entendida como la oportunidad de aprender de la variedad humana y por
tanto, de la condicin misma del ser humano en toda su dimensin.
El trabajo realizado se basa an en conceptos de integracin y no inclusin puesto que
en la UCR, a criterio del equipo investigador, no se vive la inclusin, pues no ingresan
estudiantes con Compromiso Cognitivo, lo cual limita el paradigma inclusivo, aunque existan
programas de promocin, capacitacin y adecuaciones de acceso para aquellos estudiantes
que lo requieran.
Es responsabilidad de la UCR, como parte de las instituciones del Estado
costarricense, garantizar el acceso oportuno a la educacin para todos y todas las personas,
978-84-695-8363-0
545
978-84-695-8363-0
546
La plena aceptacin de las personas con discapacidad no ser posible en tanto existan
barreras, sean stas de tipo fsico o sean an ms sutiles pero ms difciles de superar, como
las psicolgicas, que obstaculicen o entorpezcan dicho proceso (Barrantes, 1995), siendo las
barreras actitudinales quizs las ms complejas de trabajar, idea que se apoya en la siguiente
frase: la sociedad no tira a los nios discapacitados a los acantilados como se estilaba en la
antigua Grecia, pero, por medio de una red de actitudes, exterioriza la discriminacin por
razones de discapacidad (Jimnez, citado por Gonzlez, 1992, p. 48).
La percepcin que las personas tengan acerca de la discapacidad y la actitud que
manifiesten ante ella, puede ser inclusive an ms determinante y en muchos casos, limitante
para las personas con alguna condicin asociada o no a discapacidad, que la propia
discapacidad en s (Verdugo, Arias, Jenaro, 1994), ya que estas pueden llegar a percibirse a s
mismas de acuerdo con las imgenes exteriorizadas por quienes las rodean y comparten con
ellas diversos espacios. Es por ello que las actitudes cooperativas y adecuadas en las que se
valoran la independencia, la autosuficiencia, la autoestima y la buena comunicacin,
propician un mejor manejo de la discapacidad a aquellas personas con esta condicin.
A partir de estas consideraciones es posible decir que, las actitudes que los docentes y
las docentes manifiesten hacia el estudiantado con discapacidad, as como la restriccin de
oportunidades que imponga la institucin para acceder a la educacin, son variables
ambientales que pueden generar barreras reales, discriminacin, restriccin de sus
oportunidades y la limitacin para el ejercicio de los derechos constitucionales que por ley la
Institucin debe garantizar (Asamblea Legislativa, 1996).
La integracin de las personas con discapacidad o su participacin en los diferentes
niveles educativos, segn Soto (1997), ha sido una tarea que se ha venido desarrollando en el
pas en el transcurso de los ltimos veinte aos, siendo particularmente exitosa en los niveles
de preescolar, primaria y secundaria. No obstante, en el nivel universitario estos cambios no
se han dado con la misma celeridad y ms bien podra afirmarse que este proceso se ha visto
limitado en muchos casos por los altos niveles de independencia que el sistema exige, as
como por la necesidad de acceso a los diferentes medios de informacin diseados
generalmente para personas sin discapacidad.
Por otra parte Soto afirma que la Universidad ofrece una gran diversidad de opciones
de estudio que favorecen a muchos, pero que no siempre contemplan las flexibilizaciones
necesarias para responder a las necesidades especficas del estudiantado con discapacidad que
quisieran acceder a la educacin superior y cuyos perfiles, tanto de ingreso como de salida,
responden exclusivamente a los de las personas sin discapacidad (Soto, 1997).
Lamentablemente la experiencia revela que en muchos casos, la expresin de la
discapacidad se antepone a la condicin aptitudinal del estudiantado, cuando en realidad el
estudiante y la estudiante con discapacidad que ha llegado hasta el nivel universitario, ha
superado no solo su propia condicin real sino las limitaciones impuestas por el medio que le
rodea.
Es posible aseverar que, en las ltimas dcadas, gracias a una apertura legal y
educativa dirigida a facilitar el acceso a la educacin superior para las personas con
discapacidad se ha observado un incremento en el ingreso de estas personas a instituciones de
educacin superior. (Asamblea Legislativa, 1996).
978-84-695-8363-0
547
978-84-695-8363-0
548
978-84-695-8363-0
549
978-84-695-8363-0
550
Resumen
La Atencin Temprana requiere de la coordinacin con la etapa de educacin infantil para
facilitar la integracin del nio y la continuidad en los objetivos de intervencin. Para
considerar adecuada dicha coordinacin entendemos clave que los Maestros del segundo
ciclo de Educacin Infantil la valoren satisfactoriamente. Hemos analizado la opinin de 86
Maestros (36 tutores y 45 especialistas de Pedagoga Teraputica o de Audicin y Lenguaje),
de 30 Centros Escolares diferentes de Murcia capital y pedanas limtrofes, sobre el
programa de coordinacin desarrollado por el Centro de Desarrollo Infantil y Atencin
Temprana de ASTRAPACE. El instrumento utilizado ha sido un cuestionario con diecinueve
tems de respuesta tipo Likert distribuidos en tres bloques (funcionamiento de la
coordinacin, intercambio de informacin y utilidad de la informacin). Los resultados
ponen de manifiesto una alta satisfaccin general con el Programa de Coordinacin, pero
tambin aportan datos que pueden contribuir al planteamiento de propuestas de mejora. Por
ejemplo, mientras que el 73% de los Maestros dicen aportar al profesional de ASTRAPACE
la informacin que demanda siempre o frecuentemente, el porcentaje baja al 64% al
preguntarles por la sensacin de devolucin de informacin. Por otro lado, el 44,2% de los
Maestros aumentara la frecuencia con la que el profesional de ASTRAPACE visita el Centro
Escolar y el 41,9% considera que es necesario que el profesional observe al nio/a dentro del
aula.
Descriptores: atencin temprana, coordinacin, educacin infantil, centro escolar.
Abstract
We analyze the perception of teachers of the second course of Early Childhood Education (36 years) on the coordination program developed by the Centre of Child Development and
Early Attention of ASTRAPACE in Murcia (Association for the Treatment of People with
Cerebral Palsy and Related Pathologies) in collaboration with different schools in which the
children served are integrated. In this study 86 teachers took part (36 tutors and 45
specialists, including Therapeutic Pedagogy Teachers or Speech and Ear Education
Teachers) from 30 different schools in Murcia City and neighboring districts. The used tool is
a questionnaire with nineteen Likert-type questions distributed in three groups (functioning of
coordination, information exchange and utility of information). The results show a high
overall satisfaction with the coordination program, but also provide data that can contribute
to improve the program. For example, while 73% of teachers provide ASTRAPACE
professionals with the information that they always or often demand, the percentage drops to
978-84-695-8363-0
551
64% when they are asked about the return of information. Moreover, 44.2% of teachers think
that the number of visits made by ASTRAPACE professionals should be higher and 41.9%
consider that the professional must observe children within the classroom.
Keywords: early attention, coordination, early childhood education, schools, teachers.
Introduccin
El desarrollo infantil es un proceso dinmico, sumamente complejo, que se sustenta en
la evolucin biolgica, psicolgica y social. Los primeros aos de vida constituyen una etapa
de la existencia especialmente crtica ya que en ella se van a configurar las habilidades
perceptivas, motrices, cognitivas, lingsticas y sociales que posibilitarn una equilibrada
interaccin con el mundo circundante (GAT, 2000). Es por ello, que desde hace aos se viene
luchando por que exista una coordinacin entre todos los profesionales que atienden a los
nios con necesidades educativas especiales, desde la asociacin ASTRAPACE de Murcia,
con los centros escolares (3-6 aos). Dada la gran importancia de la intervencin temprana
para evitar que los problemas en el desarrollo se intensifiquen, esta etapa, junto a la de 0-3
aos, sigue siendo crtica, por lo que precisa de la mxima atencin y de una actuacin
coordinada en general, especialmente en relacin a los nios y nias con discapacidad que
puedan estar recibiendo atencin de algunas de sus necesidades fuera del sistema educativo.
Desde la entrada en vigor de la Ley Orgnica de Educacin (2006) se regula que
educacin infantil es gratuita pero no obligatoria. En el caso del alumnado que presenta
Necesidades Educativas Especiales (NEE), desde el artculo 73 se recoge que es aquel que
requiere un periodo de su escolarizacin o a lo largo de toda ella, determinados apoyos y
atenciones educativas especficas derivadas de discapacidad o trastornos graves de conducta.
El Decreto n. 359/2009, de 30 de octubre, por el que se establece y regula la respuesta
educativa a la diversidad del alumnado en la Comunidad Autnoma de la Regin de Murcia,
pretende la integracin para alumnos con necesidades educativas especiales a travs de
adaptaciones curriculares significativas en la mayora de las reas y atencin especializada
por profesor de Pedagoga Teraputica. Adems de la atencin que se les ofrece desde el
servicio pblico, a travs de leyes especializadas por las que se regulan apoyos y recursos en
los centros escolares, los nios con NEE cuentan con Centros de Desarrollo Infantil y
Atencin Temprana, que hacen un papel fundamental en los nios de los 0 a los 6 aos de
edad efectuando en ellos una atencin temprana. Esta Atencin Temprana se entiende como el
conjunto de intervenciones, dirigidas a la poblacin infantil de 0-6 aos, a la familia y al
entorno, que tienen por objetivo dar respuesta lo ms pronto posible a las necesidades
transitorias o permanentes que presentan los nios con trastornos en su desarrollo o que tienen
el riesgo de padecerlos. Estas intervenciones, que deben considerar la globalidad del nio, han
de ser planificadas por un equipo de profesionales de orientacin interdisciplinar o
transdisciplinar (GAT, 2000).
Se hace necesario que los profesionales de esta etapa compartan con los Servicios de
Apoyo que correspondan a travs del ejercicio de una adecuada coordinacin, la bsqueda de
orientaciones sobre la dimensin preventiva de su trabajo, la identificacin y valoracin de las
necesidades de los alumnos y la toma de decisiones que permitan introducir ajustes en la
planificacin a desarrollar. En el caso de alumnos con necesidades educativas especiales estos
Servicios y los de Atencin Temprana, en particular, deben ampliar su mbito de actuacin
978-84-695-8363-0
552
978-84-695-8363-0
553
Mtodo
Participantes
Los participantes han sido un total 86 maestros, (36 tutores y 45 especialistas, entre
Maestros de Pedagoga Teraputica o de Audicin y Lenguaje) de 30 Centros Escolares
diferentes de Murcia capital y pedanas limtrofes.
Instrumentos
El instrumento utilizado para esta investigacin fue un cuestionario construido para la
ocasin, que inclua 19 tems con cuatro opciones de respuesta tipo Likert (1-Nunca, 2-A
veces, 3-Frecuentemente, 4-Siempre). Estos tems se repartan en tres bloques o sub-escalas:
el primero, un conjunto de tems generales sobre la dinmica de funcionamiento de la
coordinacin (5 tems). Un segunda bloque referido al intercambio de informacin entre la
profesional del CDIAT que realiza la coordinacin con las Escuelas Infantiles y las familias
(compuesto por 6 tems). Y el ltimo, referido a la utilidad de la coordinacin y de la
informacin intercambiada (constituida por 8 tems).
Procedimiento
Nuestra investigacin ha seguido una metodologa descriptiva a travs de
cuestionarios y un procedimiento que ha tenido en cuenta la elaboracin de los mismos y su
aplicacin. Para la elaboracin de los cuestionarios se ha tenido en cuenta el marco terico y
la informacin proporcionada por el CDIAT sobre la organizacin de su Programa de
Coordinacin con los Centros Escolares de los nios que asisten al centro. Tras la elaboracin
los cuestionarios han sido supervisados por profesionales de la Universidad de Murcia
expertos en mtodos de investigacin y en Atencin Temprana.
Para la aplicacin de los cuestionarios se establecieron los contactos necesarios con los
centros educativos a los que asistan los nios. Se les envi los cuestionarios desde el
departamento de Mtodos de Investigacin y Diagnstico en Educacin de la Universidad de
Murcia en correo certificado a cada centro, pasadas dos semanas se les llam para confirmar
que haban recibido los cuestionarios y cuando les pareca bien que fusemos a recogerlos. La
recogida fue visitando cada uno de los centros educativos para comprobar que toda la
informacin era correcta y no faltaba ningn documento.
Resultados
En las siguientes tablas se presentan los resultados del cuestionario aplicado a los
profesionales de los centros escolares en las que se exponen aspectos diferentes sobre el
programa, como son los aspectos generales referidos a la dinmica de la coordinacin
realizada, los datos referidos al intercambio de informacin entre ASTRAPACE y el centro
escolar y los datos referidos a la utilidad de la informacin.
978-84-695-8363-0
554
Tabla 1
Resultados del conjunto de tems referidos a la dinmica de coordinacin realizada entre el
profesional de ASTRAPACE y el centro escolar
N
TEM
SD
3,69
0,562
3,29
0,783
2,12
1,053
3,13
0,939
3,42
0,739
Segn los datos recogidos a travs del cuestionario, la media ms alta es 3,69 y se da
en el tem que hace mencin a la necesidad de que exista coordinacin entre el centro escolar
y ASTRAPACE. La media ms baja 2,12 se da en el tem 3 y est relacionado con el cambio
de frecuencia en visitas.
Tabla 2
Resultados de los tem referidos al intercambio de informacin del profesional de ASTRAPACE con el
centro escolar
N
6
TEM
SD
3,21
0,807
2,30
0,999
3,15
0,968
3,04
0,828
10
3,73
0,570
11
978-84-695-8363-0
555
3,49
0,636
El conjunto de tems que aparecen en la Tabla 2 nos permiten valorar una serie de
cuestiones referidas al intercambio de informacin que se ha producido entre el CDIAT y los
maestros de los centros escolares. La media ms alta es 3,73 y se da en el tem nmero diez.
Los maestros/as han colaborado con los profesionales aportando informacin sobre los
alumnos de tratamiento. La media menos elevada (2,30) se da en el tem nmero siete y est
relacionado con la peticin por parte de los maestros de informacin del nio fuera del
entorno escolar.
Tabla 3
Resultados de tem referidos a la utilidad de informacin de ASTRAPACE
a los centros educativos
N
TEM
SD
12
2,46
0,881
13
2,78
1,012
14
2,88
0,900
15
3,05
0,850
16
2,95
0,865
17
2,74
0,891
3,10
0,917
2,67
0,987
18
19
978-84-695-8363-0
556
valoracin menos elevada el tem que se centra en la seguridad que puede aportar esa
informacin en el trabajo de los maestros.
Discusin
De entrada hemos de concluir, en base al resultado de nuestro estudio, que el programa
de coordinacin con Centros Escolares (etapa de Educacin Infantil de 3 a 6 aos), que viene
desarrollando el CDIAT de ASTRAPACE en Murcia, resulta altamente valorado por los
maestros implicados o que de l se benefician. Dicho programa consiste en una visita
trimestral, en fecha concertada, de la profesional responsable de la coordinacin del CDIAT al
Centro Escolar, previa recogida de informacin sobre el nio y su evolucin a travs de
reuniones de coordinacin de esta responsable con los terapeutas de atencin directa del nio.
Adems de ser bien valorada la dinmica de la coordinacin establecida (los maestros
solo valoran algo ms bajo el tem referido a la frecuencia de las visitas, quizs por que no
siempre se ha alcanzado la frecuencia inicialmente prevista), los maestros valoran
positivamente el intercambio de informacin realizado y la utilidad de la informacin
recibida. Ello contribuye a afianzar la opinin que tenemos sobre la carga de accin formativa
que implcitamente queda recogida en una actuacin de coordinacin de este tipo.
Obviamente ello redunda en beneficio de la integracin del nio, en la optimizacin de sus
posibilidades de desarrollo, pero tambin en la atencin de las necesidades de la familia y en
la mejora de las dinmicas de trabajo dentro del aula al poder implicar de forma ms adecuada
al nio con discapacidad. Ello se refleja en las opiniones de los maestros al valorar
positivamente, por ejemplo, la coordinacin para entender mejor al nio y sus las dificultades,
para organizar la intervencin y el trabajo cotidiano con el nio en el aula, etc.
Referencias
Aranda, R.E. (2008). Atencin temprana en educacin infantil. Madrid: Wolters Kluwer.
Castellanos, P., Garca Snchez, F.A. y Mendieta, P. (2000). La estimulacin sensoriomotriz
desde un Modelo Integral de Intervencin en Atencin Temprana. Siglo Cero, 31(4),
5-13.
Dunst, C. J. (2007). Early intervention for infants and toddlers with developmental
disabilities. En S. Odom, R. H. Horner, M. E. Snell, y J. B. Blacher (Eds.), Handbook of
developmental disabilities (pp. 161180). New York: Guilford.
Dunst, C. J., Bruder, M. B., Trivette, C. M., Raab, M., y McLean, M. (2001). Natural learning
opportunities for infants, toddlers, and preschoolers. Young Exceptional Children, 4,
1825.
Dunst, C. J., Hamby, D., Trivette, C. M., Raab, M. y Bruder, M. B. (2000). Everyday family
and community life and childrens naturally occurring learning opportunities. Journal of
Early Intervention, 23, 151164.
Grupo de Atencin Temprana (2000). Libro blanco de la atencin temprana. Madrid: Real
Patronado sobre Discapacidad.
978-84-695-8363-0
557
978-84-695-8363-0
558
Resumen
En esta comunicacin presentamos una propuesta de buenas prcticas para la integracin de
los jvenes inmigrantes, derivadas de los resultados de una investigacin diagnstica sobre
la integracin de los y las jvenes de 14 a 18 aos migrados a Catalunya que se llev a cabo
durante el curso acadmico 2011-2012. Los resultados de este estudio por encuesta, ofrecen
un diagnstico de la realidad de estos jvenes y visualizan la necesidad de acometer
diferentes acciones educativas en este sentido. Complementariamente, tambin se ha
recogido la voz del profesorado y de los educadores y responsables que trabajan con este
colectivo. Una vez analizados los resultados obtenidos desde las diferentes fuentes de
informacin, las conclusiones extradas nos permiten presentar una relacin de propuestas o
posibles ejemplos de buenas prcticas para mejorar el proceso de integracin de los y las
jvenes migradas, que competen tanto a las comunidades como a los centros y las
instituciones.
Descriptores: integracin, inmigracin, educacin intercultural.
Abstract
We present a proposal about good practices for the integration of young immigrants, from the
results of diagnostic research on the integration of young people aged 14 to 18 years
migrated to Catalonia conducted during the academic year 2011-2012. The results of this
survey study, provide a diagnosis of the reality of these young and visualize the need for
different educational activities. Additionally, it has also gathered the voices of teachers and
educators and managers who work with this group. After analyzing the results obtained from
the different sources of information, the conclusionspresented a list of proposed or possible
examples of good practice to improve the integration of young peoplemigrated, that concern
both the communities and centers and institutions.
Keywords: integration, immigration, intercultural education.
978-84-695-8363-0
559
29
Diagnstic en profunditat sobre la integraci dels i les joves de 14 a 18 anys migrats a Catalunya. Grup de
Recerca en Educaci Intercultural (GREDI) Universitat de Barcelona. I.P. Ruth Vil Baos (ARAFI 2011,
2012) disponible en: http://www.recercat.net/handle/2072/202893
978-84-695-8363-0
560
Metodologa
La finalidad de esta comunicacin se plantea visualizar diversas propuestas educativas
que puedan mejorar los procesos de integracin socioeducativa de la juventud extranjera en
Catalua, especficamente, de los jvenes de entre 14 y 18 aos. Esta finalidad se operativiza
desde el siguiente objetivo de la investigacin: identificar los elementos clave del estado de la
integracin de los jvenes migrantes en Catalua, y definir los elementos constitutivos y
entramados del procesado de la integracin de esta juventud en el contexto cataln, desde la
doble perspectiva de los jvenes de origen extranjero y el resto de jvenes, considerando su
vivencia y recogiendo tambin la opinin de los y las profesionales de servicios sociales y
educativos.
El estudio es diagnstico en profundidad, de carcter descriptivo-comprensivo y se
aplica una adaptacin del "Cuestionario de cohesin social entre jvenes" (Palou, 2010). Se
seleccionaron por muestreo intencional 52 centros educativos en Catalua, con ms de 3.000
sujetos representativos estadsticamente y se complement con cuatro grupos de discusin
formados por jvenes de la muestra general y 7 entrevistas en profundidad a agentes sociales
y educativos implicados en su acompaamiento.
Aspectos que favorecen la integracin
El aspecto que todos los y las jvenes (tanto autctonos como migrados) han
coincidido en sealar como ms importante para la integracin de los migrantes en la
sociedad de acogida es el aprendizaje de la lengua propia del pas que acoge al migrado.
Mmm ... no s (....)yo creo que eso pasa por el idioma, porque no es lo mismo que si viene
uno de Latinoamrica, que all hay variantes de lo que es el espaol, y nos entendemos igual
(...) mucho ms fcil llegar y relacionarte porque te entiendo. Pero si viene alguien de otro
pas que el idioma no se parece en nada, le va a costar muchsimo ms y parece que los que
estn adaptados son gente de Sudamrica. Porque yo creo que es el idioma. Es lo que yo veo
aqu. (G.D.-Alumnado autctono, IES, 1 . Bachillerato)
A ti el espaol te ha ayudado a sentirte como ms acogida por tus amigos? S.seguro (G.D.Alumnado migrado,3er. ESO).
Por otra parte, en la medida en que la lengua catalana tambin es la lengua vehicular
en las instituciones socioeducativas, su aprendizaje es igualmente importante para poder
continuar con los estudios y lograr el xito deseado. En este sentido la gestin de la acogida es
fundamental.
"Y bueno, si ests estudiando pues tambin la forma de que te habla los profesores, si te
dicen: ah, si tienes dudas pregntame y eso, esto tambin hace que te sientas mejor y que
puedas hablar y preguntar y integrarte en clase, por ejemplo ". (G.D.- Alumnado autctono,
IES 1. Bachillerato).
Vamos al aula de acogida para aprender el cataln (...) En clase de ciudadana se trata el
tema del racismo, de la convivencia ... (G.D.- Alumnado migrado IES, 3ESO).
978-84-695-8363-0
561
Ms all de estos aspectos contextuales, el / la joven migrado indica que las cualidades
personales (respeto, apertura, empata, sociabilidad, extroversin) son aspectos favorecedores
de la integracin en el actual contexto social de las sociedad de acogida.
"Ser t mismo. Primeramente cambiar uno mismo .... Si t quieres cambiar el mundo cambia
t mismo primeramente. Si t no quieres que haya racismo en el mundo o con los espaoles el
primero que No tiene que ser racista eres t ". (G.D.- Alumno ecuatoriano, Centro Abierto).
978-84-695-8363-0
562
la acogida de los jvenes migrados. Afirman que desde un modelo de escuela inclusiva, la
posibilidad de respetar unas determinadas ratios facilitara la no segregacin del alumnado
recin llegado. Este respeto por el equilibrio en nmero, tambin se da como un factor
favorecedor en entornos de la educacin social en medio abierto, uno de sus representantes
comenta: "Yo creo que una de las grandes luchas es el tema de garantizar los equilibrios
porque si conviertes el espacio slo en un espacio de poblacin migrada creo que no
ayudamos a los chicos inmigrantes".
Desde uno de los institutos, nos recordarn el acceso actual a las nuevas tecnologas
como un factor favorecedor en el aprendizaje y por tanto en la integracin. Una profesora
entrevistada nos dice: "las TICs, esto del libro digital, es tambin un factor favorecedor
porque hay muchos nios que tienen problemas con la grafa".
Cabe destacar como en diferentes profesionales se acepta que la lengua de uso de los
recin llegados y que les ayuda a la incorporacin es el castellano por el contexto en el que se
encuentran. As una de las educadoras sociales desde la educacin no formal afirma, cuando
se le pregunta por la lengua como elemento favorecedor de la integracin :"el uso de la
lengua castellana, porque por lo menos aqu en el barrio, en esta parte de Barcelona que los
jvenes se relacionan a travs del castellano. Ellos se sienten integrados nicamente
hablando el castellano". Tambin desde un instituto de Girona la profesora entrevistada
comentar: "aqu todos los compaeros de clase hablan castellano, el idioma del patio es el
castellano, el idioma de las familias es el castellano, lo que aprenden los padres es el
castellano."An as, ella misma puntualizar esta afirmacin comentando que para facilitar
los estudios "si tienen la lengua catalana podrn seguir bien sus estudios", coincidiendo con
los jvenes. Otro de los profesionales entrevistados ir ms all y afirmar ante el hecho de
poder hablar cataln por parte del y la joven de origen extranjero: "lo valoras como un gesto
de voluntad real de incorporarse plenamente a la cultura, a la sociedad catalana (...) es muy
positivo para la percepcin que los dems tienen de su voluntad de incorporarse al pas "
La identidad de las relaciones familiares, el contacto con los miembros de la propia
comunidad o barrio, las relaciones de amistad o las diferentes vas de participacin social
pueden ser aspectos favorecedores para la incorporacin de jvenes de origen extranjero,
coinciden todos los entrevistados. Algunos ponen ejemplos concretos como la de una
profesora de secundaria que dice que "todos los deportes sirven muchsimo, las fiestas
tambin promueven mucho" (...) "la msica", y en otro momento de la entrevista reafirma: "el
Bara integra". Otra psicopedagoga coincide en este criterio: "si se hacen actividades, de ir a
un esparcimiento, de ir a lugares y tratan tanto a gente de fuera como gente de aqu,
entonces, pienso que es ms fcil la integracin"
Tambin se recoge cmo son de importantes las relaciones con chicos que estn en las
mismas circunstancias para ayudar a la integracin: "es un poco la integracin emocional (...)
Entonces el hecho de encontrarse en un aula con otros compaeros que estn en la misma
situacin que ellos o que hace unos meses y que los ven que se llevan mejor (...) Porque entre
ellos hacen mucha pia".
La participacin en el tejido asociativo es un elemento que tambin se destaca como
espacio privilegiado de integracin. Desde uno de los profesionales que trabaja en el contexto
municipal comenta: "es fundamental que estos jvenes se impliquen en las entidades de la
ciudad (...) porque se incorporan a la cotidianidad de la ciudad.
978-84-695-8363-0
563
El respeto por las culturas de los jvenes migrados se consider un factor que ayuda a
sentirse integrado. Tanto desde el mundo poltico municipal como en el mundo escolar
coinciden en que "un respeto por sus culturas tambin es una manera de sentirse bien y de
ayudarles". Ponen algunos ejemplos: "hay muchos centros que dan clases de lenguas de
origen (...) pero las hacen a alumnado autctono. De alguna manera han empezado a
adquirir prestigio sus culturas de origen".
Propuestas de intervencin
Las propuestas directas que hacen los y las jvenes migrados y autctonos para
facilitar una ptima integracin y que conocemos por el vaciado de las preguntas abiertas del
cuestionario de caracterizacin son las siguientes:
Propuestas mayoritarias y similares por parte de los dos colectivos:
1 Creacin de espacios para aprender la lengua, la cultura del pas de acogida y obtener el
conocimiento del entorno y el acceso a los servicios: la acogida.
2 Creacin de espacios de relacin como: clubes, lugares de ocio, etc.
3 Creacin de instituciones que ayuden a las personas recin llegadas a buscar trabajo.
Propuestas slo de los migrados:
4 Realizar tareas con los padres para que no influyan negativamente en sus hijos.
5 Hacer acciones para favorecer la integracin tenemos en cuenta que no somos iguales y
que la diferencia se debe respetar.
6 Hacer acciones para trabajar el choque cultural
"Y tambin Cuando se mezclaba en clase de educacin fsica ...Yo quiero jugar pero no quiero jugar
con chicos, sino con chicas... y as Muchas cosas y para m es muy difcil. Me ha Sido muy difcil
adaptarme aqu. "(Bangladesh, IES , 1er. ESO)
978-84-695-8363-0
564
Niveles de actuacin
Por tanto, fruto del anlisis de los aspectos favorecedores de la integracin comunes
para todos los implicados, entendemos que se pueden establecer tres niveles de actuacin para
plantear propuestas de intervencin facilitadoras de los procesos de integracin de las
personas recin llegadas:
Nivel de comunidad
Se considera necesario y conveniente crear espacios de conocimiento que permitan el
aprendizaje de la lengua y la cultura del pas de acogida, el contexto, as como el acceso a los
servicios de los que se dispone. Paralelamente, tambin se cree necesario que estos espacios
tengan una vertiente relacional; (clubs, lugares de ocio...), dado que el aspecto relacional es
considerado un factor clave para la integracin (Palou, 2010).
Por otra parte, tambin se apunta la necesidad de realizar una labor formativa a las
familias hacia una ciudadana inclusiva. De la misma manera que hay que enfatizar acciones
conjuntas intercentros, desde el trabajo para la inclusin social desde las comisiones
socioeducativas de las escuelas, el desarrollo de proyectos para la inclusin social, acciones
puntuales como el trabajo para erradicar "rumores" y prejuicios hacia algunos colectivos
migrados y promover proyectos de aprendizaje-servicio con el alumnado extranjero como
herramienta fundamental de integracin en la comunidad. En esta lnea, y de acuerdo con
Gentili (2000) y Luque (1995), este tipo de acciones implican que las comunidades locales,
los barrios y las ciudades se reconozcan como espacios privilegiados para el desarrollo de una
ciudadana activa, de participacin e implicacin.
Nivel institucional
Las propuestas que hacen referencia a este mbito de intervencin apuntan a dos
subniveles. Por un lado, las que hacen referencia a la promocin de acciones y recursos que se
estn realizando, por ejemplo, cursos y recursos que ya se disponen y que son actualizados
constantemente, como el curso de itinerario del alumnado recin llegado, los recursos para el
aprendizaje de la lengua, recursos para la convivencia y proyectos online.
Por otra parte, se enmarcaran aqu propuestas que hacen referencia a la creacin de
acciones y recursos, como el tratamiento integral de la lengua en todas las reas curriculares,
la elaboracin de un curriculum intercultural, la creacin de una base de datos de buenas
prcticas en los centros que recoja proyectos que ya funcionan exitosamente, seminarios
permanentes dirigidos al profesorado de aulas de acogida y apoyo en la tramitacin de ayudas
econmicas conducentes a facilitar proyectos de insercin laboral para posibilitar la entrada al
mundo laboral de las personas migradas.
Nivel de centro
A pesar de la necesidad y el inters de incluir, dentro del currculum, aspectos y
miradas de otras culturas (en la lnea de que el Departamento de Educacin propone tambin
como tarea pendiente), y reforzar el currculo de tutora en contenidos transversales que hagan
referencia a los factores que favorecen la integracin, se destacan acciones relacionadas con
poner en contacto al alumnado recin llegado con su entorno fsico y humano. En esta lnea,
se recomienda el acompaamiento, desde el centro, a este alumnado para conocer su entorno
978-84-695-8363-0
565
ms cercano y valorar las oportunidades que les ofrece (un primer paso hacia proyectos de
aprendizaje-servicio a la Comunidad).
Otra propuestas destacadas tienen que ver con el intercambio de alumnado extranjero
con alumnado autctono: parejas de conversacin, actividades como persona "invitada" en
casa de otro compaero o compaera, mentoras de alumnado inmigrante con muchos aos de
residencia con los recin llegados ... Todas ellas, por ser muy cercanas, han resultado las ms
directamente provechosas en cuanto a la integracin de los chicos y chicas al trabajar, de la
manera ms vivencial, el conocimiento del otro, primer paso para el reconocimiento posterior
y su posible estima (Gonzlez, 2008).
Finalmente, cabe destacar, a modo de resumen, que las propuestas realizadas evidencian
una correspondencia con los factores que ms favorecen la integracin (lengua, relaciones de
amistades, normas y respeto hacia la otra cultura). Sin embargo, y de acuerdo con Luna
(2010), es necesario que la comunidad se perciba y sea un espacio de desarrollo del
sentimiento de pertenencia y de ejercicio de ciudadana. Para ello es imprescindible la
creacin de propuestas de intervencin que favorezcan "el sentimiento de pertenencia
comunitario", como por ejemplo el aprendizaje-servicio.
Referencias
Alarcn, A et al (2010). Joves dorigen immigrant a Catalunya. Necessitats i demandes. Una
aproximaci sociolgica. Barcelona: Collecci Estudis 27.
Bartolom, M. i Cabrera, F. (2007). Construccin de una ciudadana intercultural i
responsable. Gua para el profesorado de secundaria. Madrid: Ministerio de Educacin
y Ciencia y Narcea.
Bilbeny, N (2010). Qu vol dir integraci? Nouvinguts i establerts a les nacions europees.
Barcelona: La Magrana.
Carrasco, C. i Riesco, A. (2007) La construccin de la juventud immigrante. Transicin
profesional de jvenes procedentes de familias inmigrantes. IX Congreso Espaol de
Sociologa. Barcelona.
Etxevarra, F i Elosegui, K. (2010). Integracin del alumnado inmigrante: obstculos y
propuestas. Revista Espaola de Educacin Comparada, 16, 235-263.
Gentili, P. (coord.) (2000). Cdigos para la Ciudadana. La Formacin tica como prctica
de la libertad. Buenos Aires: Santillana.
Gonzlez, O. (2008). Cap a un curriculum intercultural a primria. La investigaci-acci
com a metodologia i la can com a desencadenant del canvi. Tesi doctoral.
Departament de Mtodes dInvestigaci i Diagnstic en Educaci. Facultat de
Pedagogia. Universitat de Barcelona.
Gutirrez, R., Mato, J. i Miyar, M. (2010). Lengua e inmigracin: conocimiento del espaol e
integracin de los inmigrantes. Revista del Ministerio de Trabajo e Inmigracin.
Migraciones Internacionales. Madrid: Ministerio de trabajo y subdireccin de
informacin administrativa y publicaciones.
978-84-695-8363-0
566
Luna, E. (2010). Del Centro Educativo a la Comunidad: un programa de aprendizajeservicio para el desarrollo de ciudadana activa. Tesi doctoral. Departament de
Mtodes dInvestigaci i Diagnstic en Educaci. Facultat de Pedagogia. Universitat de
Barcelona.
Luque, P. (1995). Espacios educativos. Sobre la participacin y transformacin social.
Barcelona: EUB.
Marin, M.A. (2005). Identidad y Multiculturalidad. En Morano (Coord.), Elogio de la
diversidad: aproximacin interdisciplinar al fenmeno de las migraciones. Salamanca:
Universidad Pontificia de Salamanca.
Martnez, J. (2006). Ciudadana, religin e integracin social. En Vidal, F. y Martnez, J.L.
Religin e integracin social de los inmigrantes: La Prueba del ngel, 64-85. Valencia:
CeiMigra.
Palou, B. (2010). La integraci de la joventut dorigen magreb a Catalunya. Tesi Doctoral.
Barcelona: Universitat de Barcelona. Departament de Mtodes dInvestigaci i
Diagnstic en Educaci.
Palou, B.; Rodriguez, M; Vil, R. (2013). Convivencia y participacin de jvenes en Sant boi
de Llobregat (Barcelona). En premsa: Revista de Educacion, 361.
http://www.revistaeducacion.mec.es/doi/361_142.pdf
Samper, S.; Moreno, R. i Alcalde, R. (2006). Poltiques locals dintegraci a la provncia de
Barcelona. Actuacions dels serveis municipals davant de les demandes de la poblaci
estrangera. Barcelona: ICPS-CIL i Diputaci de Barcelona.
Schramokowski, B. (2008). El impacto de las relaciones prximas con la poblacin autctona
en el desarrollo de la integraci. El caso de los jvenes inmigrantes en Huelva.
Portuaria, VIII (1), 77 92.
Torres, F. (2002). La integracin de los inmigrantes y algunos de los desafos que nos plantea.
En De Lucas, J. y Torres, F. (Eds.), Inmigrantes: cmo los tenemos? Algunos desafos
y (malas) respuestas, 49-73. Madrid: Talasa Ediciones.
Vil, R. (2010). La competencia comunicativa intercultural en alumnos de Enseanza
Secundaria de Catalunya. Segundas lenguas e inmigracin en red, 1(3), 88-108.
978-84-695-8363-0
567
Resumen
978-84-695-8363-0
568
Introduccin
A lo largo de los ltimos aos el cambio social y los movimientos migratorios han
modificado de forma amplia y profunda la estructura social y la poblacin educativa en
Espaa. Sin duda, los cambios experimentados por las sociedades modernas, en constante
evolucin como estamos precisando da a da, originan nuevas formas de vivir, de entender el
mundo o de trabajar, y esto nos obliga a una revisin, adaptacin y actualizacin de nuestras
maneras de enfocar la educacin.
Uno de los principales elementos que configura la realidad actual en las aulas es la
diversidad cultural, por ello los centros escolares en los ltimos tiempos se han dirigido a la
consecucin de la convivencia social entre culturas, hacia la bsqueda de la cohesin social y
la interculturalidad como filosofa para abordar dicha diversidad.
El anlisis de lo que puede estar ocurriendo en la vida de las escuelas y la convivencia
escolar ha sido y est siendo fruto de numerosas investigaciones dada su complejidad (DazAguado, 1999; Herrera y Lorenzo, 2011; Jimerson & Furlong, 2006; Lozano, Alcaraz y
Cols, 2012; Lozano, Cerezo, y Angosto, 2011; Martn y Lamarca, 2006; Torrego y Moreno,
2003; UNESCO, 2004).
Es fundamental emprender estudios que promuevan la comprensin de esta realidad y
favorezcan y ahonden en el conocimiento sobre cmo son percibidas las diversidades en las
escuelas con el fin de promover una verdadera educacin intercultural, pues estamos ante un
horizonte en el que la mayora de las referencias y experiencias en torno a la gestin de la
diversidad cultural en la escuela del estado espaol muestran un panorama pesimista (Garca
Castao, Rubio y Bou-achra, 2008; Relao, 2010; Goenechea y Garca, 2007).
La investigacin aqu resumida puede encuadrarse en esa tipologa de trabajos acerca
de la convivencia en los centros educativos cuyo ncleo exploratorio tiene que ver con los
puntos de vista que caracterizan el posicionamiento de las familias ante la diversidad cultural.
Los planteamientos educativos que apuesten por la educacin intercultural implican, entre
otros aspectos, conocer la percepcin y valoracin de personas representativas que conviven
en el mismo espacio o influyen en el contexto escolar.
En relacin a dicha percepcin y valoracin, cabe destacar que existen muy pocas
investigaciones que siten a las familias como eje central de estudio, y hemos de considerar
stas como informantes clave en la investigacin intercultural. El anlisis de la opinin de las
familias generalmente supone un objeto secundario que completa las indagaciones principales
respecto al profesorado o al alumnado extranjero.
Por consiguiente, intentaremos plantear y dar respuesta, por una parte a la percepcin
que tienen las familias que viven en la Regin de Murcia sobre la diversidad cultural en las
aulas, identificando si creen que la convivencia de diversas culturas en un centro puede
aportar a los alumnos y al resto de comunidad educativa beneficios o por el contrario plantea
dificultades para los miembros de la comunidad educativa; y por otra, las opiniones sobre
cmo debera tratarse la diversidad cultural en los centros educativos.
Por tanto, para observar cmo las familias, inmigrantes y autctonas, viven el
fenmeno migratorio nos marcamos como objetivo principal para esta investigacin, valorar
la percepcin que las familias tienen sobre la incorporacin del alumnado de procedencia
978-84-695-8363-0
569
extranjera. Como objetivo ms especfico nos proponemos analizar las propuestas de mejora
aportadas por las familias para favorecer la educacin ofrecida en los centros desde su
situacin actual caracterizada por la diversidad cultural.
Mtodo
En el presente trabajo se describe la investigacin, de naturaleza cualitativa, llevada a
cabo para analizar la situacin de convivencia escolar derivada de la diversidad cultural,
segn la opinin de las familias en diferentes centros de titularidad pblica y concertada de
Educacin Infantil y Primaria de la Regin de Murcia. Aunque la investigacin fue aplicada a
toda la Regin, en esta comunicacin nos centramos en una de las comarcas con mayor
diversidad cultural de la Regin, nos referimos a la comarca de Cartagena-Mar Menor. De
dicha zona participaron en la investigacin las familias de dos centros educativos.
Para recoger la informacin relativa a nuestro tema de investigacin utilizamos como
instrumento un cuestionario, a travs del cual, de forma annima, las familias respondan a las
distintas preguntas que se les planteaban relacionadas con datos de identificacin,
participacin y relaciones en la vida del centro, formacin dirigida a los padres y dimensin
multicultural. Como cierre a dicho cuestionario plantebamos la siguiente cuestin: cmo
podramos mejorar la educacin en un centro donde han de aprender nios y nias de
orgenes, culturas, religiones y lenguas diferentes? En esta ocasin nos centramos en esa
parte ms cualitativa del cuestionario que nos ofrece informacin detallada acerca de la
realidad escolar y las principales preocupaciones de las familias; as como posibles
alternativas para la mejora de la educacin en centros caracterizados por una amplia
diversidad cultural. Esto es posible debido a que las respuestas a dicha pregunta son
estructuras de forma parecida en todos los participantes, inicialmente exponen su opinin
acerca de la diversidad en el centro y la realidad actual de stos; y posteriormente resaltan
posibles mejoras, teniendo en cuenta dicha situacin, para favorecer el desarrollo de la
educacin ofrecida por centros educativos.
Resultados
Comenzaremos el apartado de resultados describiendo la valoracin general que las
familias realizan sobre la diversidad cultural; pues bajo nuestro entender, de sta va a
depender la actitud y las acciones que emprendamos para lograr una verdadera educacin
intercultural, ya que la valoracin positiva de la diversidad es la base de dicha educacin. El
desarrollo de la interculturalidad se enfrenta al desafo de armonizar lo universal con lo
particular a travs del encuentro entre los diferentes grupos, partiendo de las diferencias que
envuelven a cada individuo y no slo considerando sus aspectos comunes. De este modo, la
interculturalidad implica una actitud de valoracin positiva hacia la comunicacin entre
culturas y hacia la comprensin de lo diferente como algo enriquecedor a nivel individual y
colectivo.
En relacin al valor de la diversidad se han manifestado tanto familias extranjeras
como autctonas. Entre estas manifestaciones podemos observar puntos de vista dispares,
pues encontramos progenitores a favor de la diversidad, quienes destacan los beneficios de
sta, resaltando su importancia en la mejora de las relaciones que se establecen entre todos los
miembros de la comunidad educativa; y, aunque en menor grado, encontramos familias
autctonas en contra de la diversidad cultural en los centros pues manifiestan que afecta
negativamente a la calidad de la educacin. Nos parece muy buena idea que haya centros
978-84-695-8363-0
570
donde los nios aprendan otras culturas y otras lenguas y as no tendramos dificultades para
comunicarse con personas de otros pases con otros idiomas. (Familia de Bolivia). Es
positivo porque nos hace a todos ms tolerantesLa diversidad de diferentes culturas podra
afectar la enseanza de los nios/as (Familia autctona)
Precisamente el descenso del nivel educativo es una de las principales
preocupaciones que se repiten en los testimonios de las personas participantes en la
investigacin. Pero no es la nica. A continuacin exponemos dichas preocupaciones junto
con parte de testimonios que enriquecen la informacin aportada.
Podemos establecer tres preocupaciones fundamentales de las familias autctonas
derivadas de la incorporacin del alumnado de origen extranjero: el miedo a la prdida de
identidad, que la incorporacin de nuevo alumnado extranjero a los centros educativos
suponga algn tipo de merma en el acceso a los recursos y preocupacin por el descenso del
nivel educativo atribuido a la incorporacin de alumnado de origen extranjero.
Que la incorporacin pueda suponer algn tipo de merma en el acceso a los recursos,
es una de las inquietudes que aparecen a menudo en las respuestas dadas por las familias
autctonas, en el sentido de que se pueda dejar de disfrutar de becas, acceso a plazas,que
nios autctonos se queden sin poder acceder a los centros que mejor les viene porque a ellos
se les reservan ms plazas. (Familia autctona)
La preocupacin por el descenso del nivel educativo, est arraigada en la mayora de
las familias autctonas ya que casi todas han resaltado dicha temtica, por lo que han sido
numerosos los testimonios recogidos en este sentido. los centros no estn lo bastante bien
preparados para que no se retrase el aprendizaje de los que van mejor o en otro nivel.
(Familia autctona)
La prdida de identidad es otra de las cuestiones que tambin preocupa a las familias,
tanto autctonas como extranjeras. Todas ellas defienden la conservacin de sus creencias,
costumbres o ideologas. Las familias autctonas destacan que los extranjeros se deben
esforzar y adaptarse mejor a nuestro pas, y por lo tanto a nuestras costumbres y que no ha de
ser al contrario. no se adaptan igual ni conviven igual que nosotrossomos nosotros los que
nos adaptamos a ellos y no es lgico (Familia Autctona). en nuestro centro hay culturas
que no quieren habituarse a nuestras costumbres pero en cambio quieren que nosotros nos
habituemos a sus costumbres (Familia Autctona)
Las familias extranjeras por el contrario reclaman que los autctonos respeten su
cultura y que por motivos culturales no se les margine ni discrimine que se respete nuestra
cultura y nuestras tradiciones. Este comentario va dirigido sobre todo a chicas musulmanas
que llevan velo, y por ese signo religioso se les critique y a veces se le margina (Familia de
Marruecos)
En cuanto a la realidad de los centros en los que conviven diversas culturas, las
familias describen aspectos relacionados con la participacin, la creacin de guetos y la
dicotoma pblico/privado, el excesivo nmero de alumnos, la bajada de nivel educativo, la
falta de recursos y los privilegios de la poblacin extranjera. Todos estos aspectos se exponen
a continuacin:
978-84-695-8363-0
571
978-84-695-8363-0
572
978-84-695-8363-0
573
por debajo de la de los autctonos (Santos y Lorenzo, 2009; Lozano, Alcaraz y Cols, 2012;
Lozano, Cerezo, y Angosto, 2011).
Promover dicha implicacin junto con la necesaria ampliacin de recursos, la
reorganizacin de los alumnos de origen inmigrados en aulas independientes, la disminucin
de la ratio de alumnos extranjeros por aula o centro, el reparto entre las distintas tipologas de
centro (pblico, concertado y privado) y la formacin intercultural son las propuestas de
mejora destacadas por las familias. A estas propuestas queremos aunar las nuestras.
Bajo nuestro entender, los principios pedaggicos de la convivencia intercultural son
los mismos que construyen una pedagoga inclusiva basada en la confianza y en la
cooperacin como fortalezas de un aprendizaje donde la diferencia es vista como un valor y
no como algo negativo que dificulta el entendimiento y el desarrollo educativo.
Como hemos podido observar en los resultados anteriores referidos a la opinin de la
diversidad, son numerosas las familias que siguen considerando la diversidad como factor que
entorpece el desarrollo optimo de la educacin. Por ello desde los centros educativos hemos
de trabajar en esta lnea y promover una actitud positiva hacia la diversidad cultural. Un
ejemplo de esta filosofa son las comunidades de aprendizaje, pues debido al enfoque
comunicativo y dialgico que ofrecen (Dez Palomar y Flecha Garca, 2010), parece ser la
estructura ms apropiada; pues plantea intervenir fomentando las relaciones entre padres,
maestros y alumnos.
Dicha estructura fomentar al mismo tiempo la participacin de las familias en la
escuela, optimizar los recursos existentes, y promover la mejora de la calidad educativa sin
necesidad de separar por cultura pues de esta forma perderamos gran valor y la oportunidad
de aprendizaje que nos otorga la diversidad cultural.
Otro mecanismo que hemos de tener en cuenta para favorecer los aspectos hasta ahora
mencionados, es la realizacin de la Escuela de Padres en la que primero se trabaje
positivamente sobre la incorporacin de las familias extranjeras en los centros educativos,
favoreciendo el acercamiento de las distintas culturas y eliminado posturas racistas, abriendo
los ojos ante la diversidad cultural y mostrando aspectos enriquecedores para todas las
culturas. Pensamos que, a travs de estas Escuelas de Padres, como opina Bolvar (2006),
se puede potenciar, una relacin entre las familias inmigrantes y las escuelas que acogen y
educan a los nios de la inmigracin, lo que ayudar a incrementar el logro de tres metas
propias de la educacin intercultural: la construccin de conocimiento, la reduccin de los
prejuicios y la creacin de una cultura de integracin a travs de dinmicas comunitarias
centradas en la habilitacin competencial de los educandos.
Referencias
Bolvar, A. (2006). Familia y escuela: dos mundos llamados a trabajar en comn. Revista de
Educacin, 339, 119-146.
CIS, Madrid. (2009). Actitudes hacia la inmigracin (III). Madrid: Centro de investigaciones
Sociolgicas.
Daz-Aguado, M. G. (1999). Convivencia escolar y prevencin de la violencia. Madrid:
Ministerio de Educacin, Cultura y Deporte.
978-84-695-8363-0
574
978-84-695-8363-0
575
Resumen
En esta comunicacin se exponen los resultados de una investigacin que pretende valorar
los posibles efectos de un proceso de enseanza-aprendizaje sobre la comprensin de
emociones y creencias en el alumnado con trastorno del espectro autista (TEA). Para ello,
desde un enfoque de investigacin colaborativa, entre docentes universitarios y del centro
educativo se ha llevado a cabo un programa educativo con cinco alumnos con TEA
escolarizados en un centro de Educacin Infantil y Primaria de la Regin de Murcia. Los
resultados muestran que tras el proceso de intervencin educativa, los alumnos participantes
en la investigacin mejoraron su rendimiento en habilidades emocionales y sociales, y que el
desarrollo de mtodos colaborativos entre profesorado de alumnos con TEA y especialistas
universitarios incide de forma positiva sobre dichos procesos de enseanza.
Descriptores: trastornos del espectro autista, habilidades emocionales y sociales,
colaboracin escuela-universidad.
Abstract
In this communication presents the results of a research that seeks to evaluate the possible
impact of a teaching-learning process on the understanding of emotions and beliefs in
students with autism spectrum disorder (ASD). To do this, from a focus on collaborative
research among academics and educational center has been carried out an educational
program with five students with ASD in school in a center of infant and primary education in
the Region of Murcia. The results show that after the process of educational intervention, the
students participating in the research improved their performance in emotional and social
skills, and that the development of collaborative methods among teachers of students with
ASD and academic specialists impacts positively on these processes of education.
Keywords: autism spectrum disorders. Emotional and social skills, school-university
Collaboration.
978-84-695-8363-0
576
Introduccin
Los trastornos del espectro autista (TEA) hacen referencia a personas que presentan
una alteracin en el desarrollo y que se caracterizan por una serie de dificultades en las reas
social, comunicativa y cognitiva (APA, 2000). La literatura relativa a los TEA muestra las
singularidades que presentan en cuanto al procesamiento emocional, ya que manifiestan
dificultades en el reconocimiento, expresin y comprensin emocional. Estos mecanismos
aparecen de manera innata en las personas con desarrollo tpico (Gracia, Gmez, Chvez y
Creer, 2006); lo mismo ocurre con el desarrollo de habilidades bsicas para la interaccin
social. Sin embargo, esto no es as en las personas con TEA (Hobson, 1993), en las que stos
aparecen alterados teniendo que ser explcitamente enseados y aprendidos.
Baron-Cohen, Leslie y Frith (1985) informan de las dificultades mencionadas en las
personas con TEA bajo el nombre de dficit en teora de la mente. El trmino teora de la
mente (TM) describe la habilidad de la persona para comprender y predecir la conducta de
los dems, sus conocimientos, intenciones y creencias (Tirapu- Ustrroz, Prez Sayes,
Erekatxo-Bilbao y Pelegrn- Valero, 2007 citado en Lozano y Alcaraz, 2012). Esta hiptesis,
del dficit en la teora de la mente, trata de explicar los problemas de relacin y comunicacin
social presentes en las personas con TEA a partir de la existencia de dificultades para la
atribucin y comprensin de estados mentales propios y ajenos.
Por lo tanto, el reconocimiento y comprensin de emociones es la base para explicar y
anticipar las acciones de los dems, as como la capacidad de atribuir creencias entendida
como la habilidad para deducir lo que otra persona cree a partir de una situacin concreta.
Ambas capacidades estn relacionadas, ya que para adquirir el concepto de creencia, el nio
tiene que ser capaz de reaccionar a las emociones de los dems (Hamlyn, 1978).
Actualmente, existen estudios que nos informan de las dificultades que presentan las
personas con TEA para el desarrollo de las capacidades de atribucin de emociones y
creencias (Baron- Cohen, Leslie y Frith, 1985). Sin embargo, coincidimos con Tamarit (2005)
cuando afirma que en el mbito del autismo ha existido un gran nmero de investigaciones
sobre la condicin del sndrome y un nmero mucho ms escaso sobre las necesidades de las
personas con TEA.
Basndonos en todo lo que se ha comentado desde una perspectiva pedaggica se
requiere una educacin para los nios con TEA abierta y flexible, en la que entren en juego
aspectos de gran relevancia para ellos como pueden ser la comprensin de emociones y
creencias, puesto que benefician el desarrollo personal de este tipo de alumnado as como sus
relaciones e intercambios interpersonales y sociales. De ah que se contemple la idea de que la
educacin contribuya a la mejora de la calidad de vida de estas personas mediante una
respuesta educativa ajustada que ponga el nfasis en el desarrollo de la comprensin de
emociones y creencias.
Para ello, es necesario que el profesorado tenga una actitud positiva haca la inclusin
de estas personas (Horrocks, White y Roberts, 2008), y que est provisto de los recursos
personales y materiales necesarios para detectar las necesidades de los alumnos y as disear
una respuesta educativa ajustada a las mismas. En el modelo curricular actual tiene cabida la
participacin y la colaboracin de cara al buen funcionamiento de las instituciones educativas,
estableciendo as unas lneas de colaboracin que mejora cualitativamente la educacin dentro
de un modelo abierto y flexible. Por su parte, la Universidad entendida como una institucin
978-84-695-8363-0
577
compleja que est en continuo cambio e interrelacin con el entorno socioeducativo, debe
contemplar la posibilidad de generar una actitud de colaboracin institucional con la Escuela
debido a las grandes ventajas que supone para ambas instituciones y al enriquecimiento de ese
flujo de intercambios que se establecen. Teniendo en cuenta lo anterior, presentamos una
propuesta de colaboracin Escuela-Universidad que tiene como propsito el desarrollo y
puesta en marcha de estrategias, basadas en la enseanza de habilidades sociales y
emocionales, que mejoren la calidad de vida de los alumnos con TEA, as como abrir puertas
al compromiso, a la reflexin conjunta y a la cooperacin interinstitucional en un marco
educativo formal e inclusivo.
Asimismo, la investigacin que se presenta demanda un modelo integrador de las
actividades cotidianas del nio con TEA dentro del marco de intervencin, ya que es
fundamental para este alumnado que el proceso de enseanza-aprendizaje se desarrolle en
contextos cercanos, como el hogar y/o la escuela, que permita extrapolar esos aprendizajes a
otros contextos para conseguir su generalizacin (Lozano y Alcaraz, 2009; Lozano, Alcaraz y
Cols, 2010 a y b). Para ello, es necesario implicar a las familias, maestros y distintos
profesionales que trabajan con las personas con TEA que son los que enriquecen la enseanza
sistemtica y continuada de las competencias emocionales y sociales de estos alumnos
(Rodrguez, Romero y Aguilera, 2007). Conseguir dicha implicacin de todos y crear una
cultura escolar orientada a la mejora de la prctica, ayudar a alcanzar el fin propuesto en esta
investigacin.
Teniendo en cuenta lo hasta ahora expuesto, nos planteamos como objetivo general
para la investigacin valorar los posibles efectos que provoca la enseanza de comprensin de
emociones y prediccin de creencias en las habilidades sociales y emocionales de alumnado
con TEA escolarizado en un centro pblico de Educacin Infantil y Primaria, y como objetivo
ms especfico, valorar la colaboracin entre docentes e investigadores universitarios como un
proceso de investigacin en contextos naturales para el alumnado con TEA.
Mtodo
Se presenta una propuesta de investigacin en la accin en la que se ha diseado un
plan de intervencin basado en la coordinacin y la participacin entre el Equipo de
Investigacin Universitario y los docentes del centro educativo participante. Por lo que el
proceso se ha llevado a cabo a travs de un procedimiento cientfico inverso, en el sentido de
que, como afirma Cols (2009) la prctica es el principal referente para elaborar teora y no al
contrario.
En esta investigacin, han participado cinco alumnos con TEA escolarizados en aula
ordinaria, cuyas caractersticas se resumen en la tabla 1, en la que los nombres de los alumnos
son ficticios y no responden a la realidad con la finalidad de guardar la confidencialidad:
Tabla 1
Alumnos participantes
Edad cronolgica
Sexo
Nivel Educativo
Marta
4-6
Mujer
Educacin
Infantil
Ismael
6-8
Hombre
Educacin
Primaria
Cristina
6-8
Mujer
Educacin
Primaria
Andrea
7-9
Mujer
Educacin
Primaria
Ral
8-10
Hombre
Educacin
Primaria
978-84-695-8363-0
578
Enseanza de emociones
Identificacin, nominacin y clasificacin de emociones bsicas
(alegra, tristeza, enfado y miedo) a travs de dibujos.
Identificacin, nominacin y clasificacin de emociones bsicas
a travs de fotografas.
Reconocimiento de emociones a partir de situaciones cotidianas.
Reconocimiento de emociones a partir de situaciones de deseo.
Reconocimiento de emociones a partir de situaciones de
creencia.
Enseanza de creencias
Enseanza de la capacidad para
adoptar perspectivas simples.
Enseanza de la capacidad para
abordar perspectivas complejas.
Enseanza de la relacin entre ver y
saber.
Creencia verdadera y prediccin de
la accin.
Creencia falsa y prediccin de la
accin.
978-84-695-8363-0
579
el grado de competencia social de la persona valorada. Los tems de dicha escala haban sido
evaluados previamente por expertos en Metodologa, en Educacin Especial y especialistas en
la intervencin de nios con TEA, quienes determinaron la validez de su contenido.
Algunos tems ms significativos de la escala cumplimentada por las docentes
especialistas son los que a continuacin se contemplan:
Tabla 3
Ejemplos de tems de la escala valorativa
ITEMS DE LA ESCALA VALORATIVA DE HABILIDADES EMOCIONALES Y SOCIALES
Imita actos desarrollados por los dems sobre los objetos.
Te mira o te pregunta cuando alguien est alegre, triste, enfadado o asustado.
Te mira o te pregunta cuando alguien est interesado, aburrido, sorprendido o pensativo.
Expresa emociones de forma espontnea.
Se siente alegre, triste, enfadado o asustado ante una situacin generadora de tal emocin.
Ante un grupo de nios jugando pide cooperar.
Es capaz de realizar juego simblico (p.e.: hace como si comiera utilizando un palito).
Te responde adecuadamente cuando le preguntas el por qu de la alegra, tristeza, enfado y miedo de otros.
Resultados
En cuanto a los resultados obtenidos en la escala valorativa de habilidades
emocionales y sociales, todos los alumnos participantes en la investigacin obtuvieron
mayores puntuaciones tras el proceso de enseanza-aprendizaje; por tanto, la aplicacin de
ste dio lugar a mejoras en las habilidades emocionales y sociales. Dicho avance se puede
observar en el siguiente grfico:
1 26
1 06
86
66
46
26
85
69
97
87
85
75
5 659
76
62
EVALUACIN INICIAL
2010
EVALLUACIN FINAL
2012
978-84-695-8363-0
580
978-84-695-8363-0
581
cmo se siente una persona cuando cree que va a conseguir o no lo que quiere. En ltimo
lugar destacar que Cristina, algunas ocasiones, realiza juego simblico.
Discusin
Como se ha ido expresando con anterioridad, en esta investigacin, nuestro objetivo
principal es valorar si la intervencin educativa sobre la comprensin de emociones y
creencias en alumnado con TEA puede lograr avances o mejoras en sus habilidades sociales y
emocionales. Los resultados aqu obtenidos muestran que los participantes en esta
investigacin mejoraron su rendimiento en relacin a las destrezas anteriormente
especificadas. Pero estos resultados hacen referencia a los alumnos con TEA participantes en
la investigacin, por lo que han de ser interpretados con cierta prudencia y no pueden ser
generalizados a toda la poblacin de personas con TEA.
Con relacin a estos resultados, se manifiestan aspectos ms significativos en aquellas
habilidades de capacidad subjetiva, ya que todos presentan un mayor inters y atencin a las
emociones de los dems tras el proceso de enseanza- aprendizaje; asimismo son capaces de
reconocer los estados emocionales propios y ajenos asocindolos a situaciones concretas,
aunque presentan dificultad cuando las emociones puestas en juego son complejas. Se debe
seguir trabajando la capacidad para comprender las manifestaciones emocionales derivadas de
situaciones de deseo y creencia. Cuando se trata de estados emocionales propios, es
fundamental destacar el aumento de la espontaneidad al expresar las emociones generadas.
En cuanto a la justificacin de las emociones expresadas, durante el proceso se pudo observar
que la dificultad principal para los nios participantes est constituida precisamente por esta
cuestin, aunque muchos de ellos han experimentado avance en este sentido. Es de inters
destacar tambin el avance en la mayora de los casos, en la realizacin de juego simblico y
en la imitacin de actos desarrollados por los dems.
Atendiendo al aspecto procesual, nos ha servido de gran ayuda las experiencias de las
dos docentes que han participado en esta investigacin, debido a que el conocimiento de ellas
con relacin a las necesidades de este alumnado ha resultado un factor fundamental, puesto
que, no se han limitado a desarrollar slo las tareas del material diseado para ello, sino que
han ido ms all potenciando los procesos de enseanza-aprendizaje enmarcados en contextos
naturales para el alumnado con trastornos del espectro autista, puesto que en investigaciones
previas (Hadwin et al., 1996; Chin y Bernard-Optiz, 2000; Lozano y Alcaraz, 2012) se
constataba la dificultad de los alumnos con TEA que participaban en la investigacin a la hora
de extrapolar aspectos adquiridos de las competencias emocionales y sociales a situaciones de
la vida real y cotidiana. Tras analizar los resultados obtenidos compartimos la idea con
Lozano & Alcaraz (2012) que quizs la clave para la obtencin de resultados satisfactorios en
los procesos de intervencin educativa sobre alumnos con TEA, sean los procesos de
interaccin que se establecen entre los maestros, los contenidos de aprendizaje, el ambiente y
los alumnos.
Adems, el trabajo en colaboracin universidad-escuela ha tenido beneficios para
todos los que han intervenido en dicha investigacin; para los maestros, ya que a travs de
esta investigacin se le ha dado la oportunidad de compartir experiencias con otros
compaeros y con los miembros procedentes de la universidad, que les ha permitido adquirir
nuevas estrategias para el trabajo diario con los alumnos; para los miembros de la
universidad, quienes nos hemos enriquecido con las contribuciones, experiencias y
978-84-695-8363-0
582
reflexiones del profesorado de los alumnos con TEA y hemos dado sentido prctico a nuestros
planteamientos tericos.
Estas conclusiones nos incitan a seguir trabajando en esta misma direccin, conjunta,
consensuada y planificada entre Universidad-Centro-Alumno, ya que de esta forma
contribuimos a la mejora de la calidad de vida de las personas con TEA, puesto que los
resultados obtenidos ofrecen una visin optimista.
Referencias
American Psychiatric Association (APA) (2000). DSM-IV-TR. Manual diagnstico y
estadstico de los trastornos mentales. Barcelona: Masson.
Baron-Cohen, S., Leslie, A. y Frith, U. (1985). Does the autistic child have a theory of mind?
Cognition, 21, 37-46.
Chin, H. Y. y Bernard-Opitz, V. (2000). Teaching conversational skills to children with autism:
Effect of the development of a Theory of Mind. Journal of Autism and Developmental
Disorders, 30(6), 569-583.
Cols, M. P. (2009). Competencias cientficas-tcnicas para realizar una investigacin-accin.
En Cols, M.P., Buenda L. y Hernndez, F. Competencias cientficas para la realizacin
de una tesis doctoral (pp.119-140). Barcelona: Davinci.
Gracia, M. J., Gmez, I., Chvez, M. y Greer, D. (2006). Toma de perspectiva y teora de la
mente: aspectos conceptuales y empricos: Una propuesta complementaria y pragmtica.
Salud mental, 29(6), 5-14.
Hadwin, J., Baron-Cohen, S., Howlin, P. y Hill, K. (1996). Can we teach children with autism
to understand emotions, belief or pretence? Development and Psychopathology, 8(2), 345365.
Hobson, R. (1993). El autismo y el desarrollo de la mente. Madrid: Alianza Editorial.
Horrocks, J.L., White, G., y Roberts, L. (2008). Principals attitudes regarding inclusion of
children with autism in Pennsylvania public schools. Journal of autism and developmental
disorders, 38, 1462-1473.
Lozano, J., Alcaraz, S. y Sotomayor, J. A. (2009). Escala de valoracin de la competencia
social en alumnado autista o con trastornos del espectro autista. Educar en el 2000, 12,
85-94.
Lozano, J. Alcaraz, S. y Cols, P. (2010a). Experiencia educativa sobre la comprensin de
emociones y creencias en alumnado con trastornos del espectro autista. Revista de
Investigacin (RIE), 28, 65-78.
Lozano, J. Alcaraz, S. y Cols, P. (2010b). La enseanza de emociones y creencias a alumnos
con trastorno del espectro autista: Una investigacin colaborativa. Profesorado. Revista de
Curriculum y Formacin del Profesorado, 14, 367-382.
978-84-695-8363-0
583
Lozano, J. y Alcaraz, S. (2012). Respuesta educativa a las personas con Trastorno del
Espectro Autista. Madrid: La Muralla.
Rodrguez, I. R., Moreno, F. J. y Aguilera, A. (2007). La atencin educativa en el caso del
alumnado con Trastornos del Espectro Autista. Revista de Educacin, 3(44), 425-445.
Tamarit, J. (2005). Autismo: modelos educativos para una vida de calidad. Revista de
Neurologa, 40(1), 181-186.
978-84-695-8363-0
584
Resumen
En la Regin de Murcia, al igual que en otras Comunidades Autnomas, se han venido
desarrollando protocolos de actuacin para dar respuestas coordinadas a personas con
algn tipo de dificultad, como en el caso del alumnado con Trastorno por Dficit de Atencin
con Hiperactividad (TDAH). El presente estudio tiene como objetivo analizar y comparar el
proceso de evaluacin psicopedaggica seguido y el diagnstico clnico final de TDAH en
una muestra de alumnos de Educacin Infantil y Primaria. Se ha utilizado una metodologa
de anlisis de casos a travs del cotejo de los expedientes individuales que reflejan
valoraciones en los ltimos cinco aos. El trabajo recoge mltiples resultados de inters en el
mbito del diagnstico psicopedaggico y clnico del TDAH. Concluimos que las tipologas
diagnsticas resultantes de los procesos de evaluacin psicopedaggica son coincidentes con
las realizadas por los titulados sanitarios.
Descriptores: Trastorno por Dficit de Atencin con Hiperactividad (TDAH), evaluacin
psicopedaggica, diagnstico clnico, estudio de casos, protocolos de intervencin.
Abstract
In the Region of Murcia, as well as in other Spanish regions, coordinated response protocols
have been performed to assist persons with any kind of difficulty, as in the case of students
with Attention Deficit Hyperactivity Disorder (ADHD). The present study aims to analyze and
compare the psychoeducational assessment process followed and the final clinical diagnosis
of ADHD in a sample of children of infant and primary school age. For this purpose, we used
a case analysis methodology through collate of individual reports that reflect assessments in
the last five years. This paper presents multiple outcomes of interest in the field of
psychoeducational and clinical diagnosis of ADHD. We conclude that the diagnostic
typologies resulting from psychoeducational assessment processes are consistent with those
made by health care professionals.
Keywords: Attention Deficit Hyperactivity Disorder (ADHD), psychoeducational assessment,
clinical diagnosis, case studies, intervention protocols.
978-84-695-8363-0
585
Introduccin
El Trastorno por Dficit de Atencin con Hiperactividad (TDAH) es un sndrome
conductual de inicio en la infancia, con base neurobiolgica y caracterizado por la presencia
de un desarrollo inapropiado de los mecanismos que regulan la atencin, la reflexividad y la
actividad (Soriano, 2003). Suele aparecer antes de los 7 aos de edad, con manifestaciones de
desatencin (que pueden darse tanto a nivel acadmico, como social o laboral) e interferencias
derivadas del trastorno en estos mbitos. Es importante tener en cuenta, adems, que el
TDAH es una de las alteraciones de mayor prevalencia en la infancia y la adolescencia;
siendo predominante en varones (Snchez y Herrera, 2010; Herrera, Bermejo, Fernndez y
Soto, 2011).
Respecto a su evolucin, existe la posibilidad, debido a la inestabilidad de este
trastorno, de que algunos sntomas desaparezcan con el tiempo. Sin embargo, lo habitual es
que las dificultades que lo caracterizan se puedan detectar con mayor claridad entre los 6 y 9
aos, incrementndose de forma pronunciada con el paso de los aos (Herrera et al., 2011).
No disponemos de un nico modelo explicativo aceptado por la totalidad de los
investigadores. A pesar de ello, el modelo multifactorial parece ser el ms indicado para
explicar su inicio y evolucin (Herrera, Calvo y Peyres, 2003; Herrera et al., 2011). Este
modelo considera que son varios los elementos de riesgo externos e internos que interactan
entre s, dando lugar a la aparicin del trastorno hiperactivo y modulando su pronstico.
Aunque la mayor parte de los individuos presentan sntomas tanto de desatencin
como de hiperactividad-impulsividad, en algunos predomina uno u otro de estos patrones. El
subtipo concreto depender del grupo de sntomas que haya sido dominante durante los
ltimos 6 meses. Se considerar que estamos ante un Trastorno por Dficit de Atencin con
Hiperactividad, con predominio del Dficit de Atencin o Inatento (TDAH-I) cuando hayan
prevalecido las manifestaciones de desatencin, con menos de 6 sntomas de hiperactividadimpulsividad. El Trastorno por Dficit de Atencin con Hiperactividad, con predominio
Hiperactivo-Impulsivo (TDAH-H-I) se establecer como diagnstico final en el caso de que
hayan persistido las seales de hiperactividad-impulsividad, pero menos de 6 signos de
desatencin. El Trastorno por Dficit de Atencin con Hiperactividad, tipo Combinado
(TDAH-C) se utilizar cuando ambos grupos de sntomas (6 o ms de cada uno de ellos)
hayan estado presentes.
Tanto en nios como en nias, el subtipo combinado es el que se da con ms
frecuencia y el hiperactivo-impulsivo el menos comn (Rhode et al., 2000; Cornejo et al.,
2005; Rodrguez et al., 2009). El subtipo inatento suele diagnosticarse ms tarde (avanzada la
primaria o en el instituto) y es ms habitual entre las nias (Soutullo y Mardomingo, 2010).
Junto a la sintomatologa primaria del TDAH pueden darse otros problemas
secundarios que afectan al desarrollo del nio. Es necesario realizar un diagnstico
diferencial, ya que otros trastornos de distinta naturaleza suelen confundirse o presentar
comorbilidad con el trastorno hiperactivo. Segn Hidalgo y Soutullo (2008), ms del 85% de
las personas con TDAH tiene al menos una comorbilidad asociada y alrededor del 60% por lo
menos dos. Otros estudios han confirmado que ms del 50% cumplen criterios de uno o ms
problemas asociados, como los trastornos del estado de nimo, de ansiedad, por consumo de
sustancias, del aprendizaje o comportamentales (Brown, 2003; Dez, Figueroa y Soutullo,
2006). Y tambin se ha destacado la presencia de problemas de lenguaje en esta poblacin
978-84-695-8363-0
586
978-84-695-8363-0
587
casos.
Instrumentos
Para recoger los datos del presente trabajo se utiliz un instrumento con formato de
ficha de registro estndar, el cual fue elaborado para tal fin y completado con la informacin
disponible en los diferentes expedientes psicopedaggicos de los sujetos participantes (sexo,
curso, edad, datos del centro, motivo de consulta, informacin sobre el desarrollo, datos
escolares y familiares, diagnstico, etc.).
Procedimiento
Como hemos sealado, para la seleccin de la muestra se utilizaron los datos,
archivados en la Sede del EOEP Cartagena 1, de los sujetos evaluados por presentar
sintomatologa compatible con el TDAH. Respecto al procedimiento habitual de recogida de
informacin por parte del EOEP, inicialmente se elabora un documento de registro estndar
para incluir la informacin de inters de cada uno de los casos analizados. Seguidamente, se
realiza un vaciado de los expedientes relativo a datos de identificacin, variables
situacionales, caractersticas cognitivas, atencionales y comportamentales, as como
problemas asociados y caractersticas de inters diagnstico.
Una vez recabada toda esta informacin fue generado un archivo Excel, una hoja de
clculo electrnica, que permite ms fcilmente su tratamiento y posterior exportacin a
SPSS.
Anlisis de datos
Para realizar el anlisis de los datos se utiliz el Paquete Estadstico SPSS 19, el cual
nos permiti obtener las frecuencias y porcentajes de los componentes utilizados, as como
conseguir valores chi-cuadrado que informan de la relacin existente entre las variables objeto
de estudio.
Resultados
Entre los hallazgos ms sobresalientes se encuentran los relacionados con las variables
gnero, edad, motivo inicial de la consulta, caractersticas del centro, caractersticas del
contexto familiar, tipologas de TDAH y trastornos asociados diagnosticados, por citar
algunas de ellas. En particular, prevalecen los varones con 39 casos, completando la muestra
15 mujeres (vase Tabla 1).
Tabla 1
Sexo de los participantes: frecuencias y porcentajes
Vlidos
Sexo
Femenino
Frecuencia
15
Porcentaje vlido
27,8
Masculino
39
72,2
Total
54
100
978-84-695-8363-0
588
Vlidos
Frecuencia
17
8
29
54
Porcentaje vlido
31,5
14,8
53,7
100
Asimismo, para el diagnstico clnico de los 25 casos con datos disponibles (vase
Tabla 3) el patrn es similar. Cuando contrastamos ambos tipos de diagnsticos,
psicopedaggico y clnico, vemos que en los realizados por el EOEP Cartagena 1 predomina
el subtipo combinado, seguido del desatento y del hiperactivo. En los diagnsticos clnicos,
destaca tambin el subtipo combinado, seguido del inatento, otros diagnsticos diferentes y el
subtipo hiperactivo. Los otros diagnsticos se refieren a Trastorno Generalizado del
Desarrollo, Dficit Auditivo, Trastorno Negativista Desafiante y Dificultades de Aprendizaje.
Tabla 3
Comparacin del diagnstico psicopedaggico y clnico (subtipo): frecuencias, porcentajes y pruebas
chi-cuadrado
Evaluacin
psicopedaggica
(subtipo)
Diagnstico clnico
Hiperactivo Combinado
Subtipo
Inatento
Otro
Total
Inatento
7 (70%)
0 (0%)
1 (10%)
2 (20%)
10 (100%)
Hiperactivo
0 (0%)
2 (66,7%)
1 (33,3%)
0 (0%)
3 (100%)
Combinado
1 (8,3%)
0 (0%)
8 (66,7%)
3 (25%)
12 (100%)
Total
8 (32%)
2 (8%)
10 (40%)
5 (20%)
25 (100%)
Pruebas chi-cuadrado
Chi-cuadrado de Pearson
Valor
27,406a
gl
6
978-84-695-8363-0
589
Tabla 4
Confirmacin del subtipo por parte de Salud Mental: frecuencias y porcentajes
Confirmacin Clnica
S
No
7 (77,8%)
3 (22,2%)
Total
10 (100%)
Hiperactivo
2 (66,7%)
1 (33,3%)
3 (100%)
Combinado
Total
8 (66,7 %)
17 (70,8%)
4 (33,3%)
8 (29,2%)
12 (100%)
25 (100%)
Subtipo
Inatento
Evaluacin psicopedaggica
(subtipo)
978-84-695-8363-0
590
asociada que muestran estos sujetos. Hemos encontrado que las comorbilidades ms
frecuentemente asociadas al trastorno de hiperactividad son las dificultades en el lenguaje
(53,7%), seguidas de los problemas en la lectoescritura (51,9%), las dificultades motoras
(37%), los problemas cognitivos (25,9%), otras problemticas (22,2%), los problemas de
conducta (20,4%), las dificultades en el rendimiento acadmico (7,4%) y los casos de altas
capacidades (1,9%). Nuestros resultados no confirman la informacin aportada por la
Federacin Espaola de Asociaciones de Ayuda al Dficit de Atencin e Hiperactividad, que
afirma que los trastornos de conducta son los que ms a menudo aparecen comrbidos al
TDAH. Segn nuestros datos, la asociacin ms frecuente se da con los problemas de
lenguaje, en concordancia con el estudio de Ygual (2003), donde se indica que dichas
dificultades aparecen en una proporcin elevada de estos sujetos (entre el 8 y el 90%).
Para finalizar, con el presente trabajo hemos pretendido contribuir al conocimiento del
proceso de evaluacin psicopedaggica y de diagnstico clnico del alumnado con TDAH.
Sera deseable que en trabajos posteriores pudiramos analizar algunos de los procesos
intermedios que unos profesionales y otros emplean para llegar a sus conclusiones respecto al
diagnstico, coincidentes en la mayora de los casos, pero divergentes en algunos de ellos.
Referencias
Asociacin Americana de Psiquiatra (2002). Manual diagnstico y estadstico de los
trastornos mentales (DSM-IV-TR). Barcelona: Masson.
Brown, T. (2003). Trastornos por dficit de atencin y comorbilidades en nios, adolescentes
y adultos. Barcelona: Masson.
Consejera de Sanidad y Consumo y Consejera de Educacin, Formacin y Empleo, Regin
de Murcia (2008). Protocolo de coordinacin de actuaciones educativas y sanitarias
en la deteccin y diagnstico del trastorno por dficit de atencin e hiperactividad
(TDAH). Murcia: Consejera de Sanidad y Consumo. Servicio Murciano de Salud.
Subdireccin General de Salud Mental.
Cornejo, J.W., Oso, O., Snchez, Y., Carrizosa, J., Snchez, G., Grisales, H., Castillo-Parra,
H. y Holgun, J. (2005). Prevalencia del trastorno por dficit de atencinhiperactividad en nios y adolescentes colombianos. Revista de Neurologa, 40(12),
716-722.
Dez Surez, A., Figueroa Quintana, A. y Soutullo Espern, C. (2006). Trastorno por dficit
de atencin e hiperactividad (TDAH): comorbilidad psiquitrica y tratamiento
farmacolgico alternativo al metilfenidato. Revista de Pediatra de Atencin Primaria,
8(4), 135-155.
Domingo Jimnez. M.R. (2005). Trastorno por dficit de atencin e hiperactividad. Anales de
Pediatra, 62, 54-59.
Federacin Espaola de Asociaciones de Ayuda al Dficit de Atencin e Hiperactividad
(FEAADAH). Disponible en: http://www.feaadah.org. Fecha de consulta: 31/01/2013.
Herrera Gutirrez, E., Calvo Llena, M.T. y Peyres Egea, C. (2003). El trastorno por dficit de
atencin con hiperactividad desde una perspectiva actual. Orientaciones a padres y
978-84-695-8363-0
591
978-84-695-8363-0
592
Resumen
Los objetivos del trabajo que nos ocupan son conocer cules son las medidas ordinarias que
constituyen la respuesta educativa a las necesidades del alumnado con TDAH en la Regin
de Murcia y cul es el rendimiento de este alumnado cuando es atendido de manera
especializada. La muestra estuvo constituida por 207 profesores tutores de otros tantos
alumnos de Educacin Infantil y Primaria, con diagnstico confirmado por salud mental de
TDAH o en proceso de deteccin, escolarizados en centros educativos de carcter pblico,
concertado o privado. De ellos, 14 se encuentran escolarizados en Educacin Infantil y 197
asisten a Educacin Primaria. Las medidas ordinarias desarrolladas en mayor medida han
sido: apoyo grupo ordinario en un 61,4% de los casos, refuerzo y apoyo curricular, en
el 55,6% del alumnado diagnosticado y en un 32,9% de las ocasiones se ha llevado a cabo la
graduacin materiales y actividades y la inclusin de las TICs.
Descriptores: TDAH, diagnstico en educacin, intervencin, medidas ordinarias,
rendimiento escolar.
Abstract
Our objectives are know the common process that constitute the educational response to the
needs of students with ADHD in the Region of Murcia and how is the achievement of these
students when are treated specially. The sample was 207 teachers of students with a
confirmed diagnosis of ADHD or in detection process; teacher of public, private or concerted
schools. 14 Of these are students of Early Childhood and 197 Elementary Education.
Ordinary measures developed further were: "ordinary group support" in 61.4% of cases,
"curricular reinforcement and support" in 55.6% of students diagnosed, and 32.9% of the
time they have developed process to "Graduation materials and activities" and "inclusion of
ICTs".
Keywords: ADHD, assessment in education, treatment, ordinary measures, achievement.
Introduccin
La nota comn que define las aulas de hoy en da, es la diversidad de los alumnos que
las componen. Entre esta heterogeneidad, hallamos una variada presencia de obstculos que
impiden que los estudiantes logren los aprendizajes esperados. Uno de los escollos que
978-84-695-8363-0
593
978-84-695-8363-0
594
978-84-695-8363-0
595
978-84-695-8363-0
596
Tabla 1
Atencin psicopedaggica recibida por el alumnado con TDA-H
Atencin psicopedaggica
Frecuencia
No ha recibido nunca
27
Ha recibido, pero en la actualidad no
34
En la actualidad recibe
122
Porcentaje
13
16,4
58,9
Frecuencia
47
52
11
33
17
34
27
24
21
68
115
127
49
31
50
27
68
Porcentaje
22,7
24,6
5,3
15,9
8,2
16,4
13
16,11
10,1
32,9
55,6
61,4
23,7
15
24,2
13
32,9
Las medidas ordinarias que se incorporan por parte de los centros para este alumnado
suele ser las referidas al apoyo grupo ordinario en un 61,4% de los casos, refuerzo y apoyo
curricular en el 55,6% del alumnado diagnosticado, y un 32,9% de las ocasiones se han
desarrollado con ellos medidas referidas a Graduacin materiales y actividades y la
inclusin de las TICs.
En cualquiera de los casos, en los centros de titularidad pblica se suelen dar medidas
ordinarias ms variadas que en los concertados. As, si observamos las diferencias estadsticas
que se obtienen segn la titularidad, se aprecian a favor de los centros pblicos disparidades
respecto al trabajo con el alumnado con TDA-H desarrollando aprendizajes por tareas (sig.
,01), aprendizaje autnomo (sig. ,049), contratos didcticos (sig. ,034), enseanza
multinivel (sig. ,008), trabajo por rincones (sig. ,012) y refuerzo y apoyo curricular
especialmente en contenidos instrumentales (sig. ,014).
978-84-695-8363-0
597
Tabla 3
Rendimiento obtenido por el alumno con TDA-H
Rendimiento: calificacin media del alumno
Frecuencia
Suele suspender 3 o ms
65
Suele suspender 1 o 2
53
Suele obtener calificaciones de aprobado
51
Suele obtener calificaciones de notable
33
Suele obtener calificaciones de sobresaliente
5
Porcentaje
31,4
25,6
24,6
15,9
2,4
978-84-695-8363-0
598
Referencias
C.A.R.M. (2009) Decreto nmero 359/2009, de 30 de octubre, por el que se establece y
regula la respuesta educativa a la diversidad del alumnado en la Comunidad
Autnoma de la Regin de Murcia. Boletn Oficial de la Regin de Murcia nmero
254, p. 57.608.
C.A.R.M. (2012) Resolucin de 17 de diciembre de 2012, de la Direccin General de
Planificacin y Ordenacin Educativa por la que dictan orientaciones para la
atencin educativa del alumnado que presenta dificultades de aprendizaje. Boletn
Oficial de la Regin de Murcia 295 de 22 de diciembre de 2012, p. 51.180.
Consejera de Sanidad y Consumo y Consejera de Educacin, Formacin y Empleo, Regin
de Murcia (2008). Protocolo de coordinacin de actuaciones educativas y sanitarias
en la deteccin y diagnstico del trastorno por dficit de atencin e hiperactividad
(TDAH). Murcia: Consejera de Sanidad y Consumo. Servicio Murciano de Salud.
Subdireccin General de Salud Mental.
Guzmn, R. & Hernndez-Valle, M.I. (2005). Estrategias para evaluar e intervenir en las
dificultades de aprendizaje acadmicas en el Trastorno de Dficit de Atencin con/sin
Hiperactividad. Qurriculum: Revista de teora, investigacin y prctica educativa, 18,
147-174.
Ley Orgnica de Educacin, n 106, Boletn Oficial del Estado (2006).
Marchesi, A. (2005). Qu ser de nosotros los malos alumnos. Madrid: Alianza editorial.
Miranda, A.; Amado, L. y. Jarque, S. (2001). Trastornos por dficit de atencin con
hiperactividad. Una gua prctica. Mlaga: Aljibe.
Orden de 4 de junio, n 137, Boletn Oficial de la Regin de Murcia (2010).
Orjales, I. (2005). Dficit de atencin con hiperactividad. Manual para padres y educadores.
Madrid: CEPE.
Ramos, J.; Michel, A.; Snchez, L.M.; Matute, E. y Garca, A. (2011). Relacin entre el
Funcionamiento Ejecutivo en Pruebas Neuropsicolgicas y en el Contexto Social en
Nios con TDAH. Revista Neuropsicologa, Neuropsiquiatra y Neurociencias. 11 (1),
1-16.
Rodrguez-Prez et al. (2009). TDAH y Dificultades de Aprendizaje en escritura:
comorbilidad en base a la Atencin y Memoria Operativa. European Journal of
Education and Psychology, 2(3), 180-198.
978-84-695-8363-0
599
Resumen
Los importantes avances que se han derivado de la investigacin desde el campo de las
Dificultades Especficas de Aprendizaje (DEA), permiten actualmente conceptualizar,
identificar e intervenir de manera ms precisa y temprana con el alumnado con DEA. Poco
se sabe si el profesorado se apoya en estos conocimientos a la hora de identificar e intervenir
con este alumnado. Por ello en este trabajo nos propusimos analizar los conocimientos que
tiene el profesorado de Educacin Infantil y de Primaria sobre las DEA en lectura y
escritura. La muestra estuvo compuesta por 149 profesores/as pertenecientes a centros
pblicos y concertados. La recogida de informacin se llev a cabo mediante una escala tipo
Likert formada por 38 tems con tres alternativas de respuesta. Los resultados mostraron que
el profesorado tiene conocimientos sobre las DEA, principalmente en el mbito de la
intervencin.
Descriptores: Dificultades especficas de aprendizaje, Lectura, Escritura, Profesorado,
Conocimientos.
Abstract
The advances that have been derived from the research in the field of specific learning
difficulties, allow currently to conceptualize, to identify and to intervene earlier and in a more
accurate way with the students who suffer from specific learning difficulties. It is not known if
teachers make good use of this knowledge in the identification and later intervention with
these students. Therefore, we had the purpose in this research to analyze the knowledge that
Early Childhood Education and Elementary teachers have on specific learning difficulties in
reading and writing. The sample consisted of 149 teachers belonging to public and statesubsidised schools. The collection of data was carried out using a Likert scale consisting of
38 items with three alternative responses. The results showed that teachers have knowledge of
specific learning difficulties, mainly in the area of intervention.
Keywords: Specific learning disabilities, Reading, Writing, Teaching, Knowledge.
978-84-695-8363-0
600
Introduccin
El dominio de habilidades como la lectura y escritura ocupan un lugar de particular
significacin en el currculum escolar. Esto no es de extraar si tenemos en cuenta que, tanto
la lectura como la escritura, constituyen habilidades de carcter instrumental que posibilitan la
adquisicin autnoma de la mayora de los aprendizajes posteriores. Pero el dominio de estas
habilidades no es nicamente un objetivo curricular de la enseanza obligatoria, sino,
igualmente, una exigencia social para participar activamente en una sociedad alfabetizada
como la nuestra. Quiz sta sea una de las principales razones por la que el aprendizaje de la
lectura y escritura y sus dificultades han sido desde hace varias dcadas, y continan siendo
en la actualidad, un relevante tpico de investigacin, as como un tema de gran inters para
los profesionales de la prctica.
Si bien para cualquier adulto leer y escribir son actividades rutinarias que se realizan
sin gran esfuerzo por estar altamente automatizadas, el aprendizaje de estas habilidades
bsicas requiere de una enseanza explcita, no carente de esfuerzos, principalmente, para los
que comienzan a afianzarse en el conocimiento de las mismas. De hecho, y tomando como
referencia el enfoque psicolingstico, la lectura y escritura se han conceptualizado como
actividades cognitivas complejas en las que intervienen mltiples procesos cognitivos y
lingsticos (Cuetos, 2008, 2010). Aunque, la mayor parte del alumnado domina la
lectoescritura en el primer ciclo de la etapa obligatoria, la naturaleza compleja de estas
habilidades en cuanto a su aprendizaje, contribuye a que muchos de ellos no las aprendan con
xito y algunos presenten Dificultades Especficas de Aprendizaje (DEA). En este sentido, los
estudios que se han llevado a cabo desde una perspectiva evolutiva, no slo evidencian que
existen diferencias en los procesos implicados en estas habilidades entre nios/as con y sin
DEA, sino que adems se ha encontrado que estas diferencias persisten y se mantienen a lo
largo de la escolaridad (Alegra, Carrillo y Snchez, 2006; Jimnez, Rodrguez, Guzmn y
Garca, 2010).
Probablemente, las DEA en lectura y escritura sean uno de los trastornos evolutivos
que con mayor frecuencia se presenta e identifica en la educacin obligatoria. En nuestro
contexto se ha sealado que es la categora diagnstica en la que se encuentran recibiendo
educacin especializada un mayor nmero de alumnos/as (Fernndez, 2011). Si bien, se ha
encontrado que el ndice de prevalencia vara de unos pases a otros, producto principalmente
de: las diferencias en la complejidad ortogrfica de las lenguas, del concepto de DEA que se
utilice y, en consecuencia, de los criterios de diagnsticos que se empleen para su
identificacin (Jimnez, Guzmn, Rodrguez y Artiles, 2009), de lo que no cabe duda es que
el profesorado con frecuencia se encuentra con alumnos/as que tienen dificultades cuando
aprenden a leer y escribir. Bien sea porque tienen dificultad en el reconocimiento de las
palabras, lo que repercute en la comprensin de lo que leen, porque tienen problemas con la
ortografa de las palabras o porque son incapaces de planificar el discurso en una redaccin,
etc., en cualquiera de los casos el profesorado puede estar ante estudiante con riesgo de
presentar una DEA. Cualquiera de los argumentos anteriores justifica la necesidad de
identificar e intervenir tempranamente con el alumnado con dificultades de aprendizaje, para
evitar que estas se perpeten y tengan, en consecuencia, un difcil pronstico. Dentro de este
proceso de identificacin e intervencin, el profesorado desempea un papel fundamental.
La conceptualizacin y clasificacin de quines son los alumnos/as que presentan
DEA no ha estado exenta de debates y discusiones, principalmente dentro de nuestras
fronteras (Surez, 2011). En el mbito cientfico internacional las DEA han sido entendidas
978-84-695-8363-0
601
en sentido restringido, considerando que estas son debidas a causas internas al propio sujeto.
Sin embargo en Espaa, hasta hace pocos aos, las DEA se han entendido en un sentido
amplio quedando englobadas bajo el trmino de Necesidades Educativas Especiales (NEE).
As la categora diagnstica utilizada para hacer referencia a las Dificultades de Aprendizaje
(DA) se destinaba a los alumnos que no aprendan en el contexto del aula con los recursos
ordinarios y se observa un desfase, entre ellos y sus compaeros, en los aprendizajes bsicos
que por su edad deberan haber alcanzado. A la hora de identificar a este alumnado, era
prctica habitual que el profesorado considerara o tomara como referencia bsicamente el
criterio curricular. As, cualquier estudiante que presentara un desfase curricular en una
competencia instrumental, como por ejemplo la lectura o escritura, era susceptible de ser
identificado como un alumno/a con DA, con independencia de la causa que estaba originando
esta dificultad (i.e., sensoriales, socioambientales, falta de escolaridad, etc.).
Con la entrada en vigor de la Ley Orgnica 2/2006, de 3 Mayo, de Educacin (LOE),
el trmino Dificultades Especficas de Aprendizaje se incorpora por primera vez en la
legislacin educativa, reconociendo las Necesidades Especficas de Apoyo Educativo (NEAE)
de estos estudiantes y el deber de asegurar, por parte de las diferentes Comunidades
Autnomas, los recursos necesarios para el apoyo y refuerzo educativo a sus problemas para
aprender. No obstante, esta normativa no define el trmino DEA, dejando esta competencia a
cada Comunidad Autnoma. Aunque, son pocas las Comunidades que han regulado de
manera especfica el mbito de las DEA (Fidalgo y Robledo, 2010), en algunas se han
desarrollado normativas que permiten regular los procedimientos y criterios diagnsticos para
su identificacin, as como algunas pautas de intervencin que permitan a los profesionales
orientar la respuesta educativa de este alumnado. Especficamente, hacemos referencia a la
Comunidad Autnoma Canaria, en la que desde el ao 2007, la Consejera de Educacin
emite un Informe sobre definiciones de las DEA en funcin de su carcter heterogneo y los
criterios para su identificacin (Jimnez y Artiles, 2007). Las definiciones y orientaciones
propuestas en este informe preliminar son recogidas posteriormente, en el Decreto 104/2010,
de 29 de julio, por el que se regula la atencin a la diversidad, y su posterior concrecin en la
Orden 7036/2010, de 13 de diciembre, destinada a la atencin educativa del alumnado con
NEAE, donde se regulan las DEA. Al respecto, se entiende que:
un alumno o alumna presenta dificultades especficas de aprendizaje
cuando muestra alguna alteracin en uno o ms de los procesos psicolgicos
bsicos implicados en la adquisicin y uso de habilidades de escucha, habla,
lectura, escritura, razonamiento o habilidades matemticas: Aunque las DEA
pueden presentarse simultneamente con el dficit psquico, sensorial, motor o
emocional, o con influencias extrnsecas tales como problemas socioculturales,
instruccin inapropiada o insuficiente, no son resultado de aquellas condiciones
o influencias (Orden 7036/2010).
Asimismo, se han desarrollado programas para la atencin educativa del alumnado con
DEA, en los que se ofrecen orientaciones precisas en relacin a la evaluacin, identificacin e
intervencin a desarrollar con este alumnado, incluyendo tambin material y actividades de
gran utilidad para el profesorado.
Las anteriores actuaciones por parte de algunas Consejeras de Educacin, como en la
que se desarrolla este trabajo, evidencian que estamos asistiendo a un cambio sustantivo de
orientacin dentro del mbito de las DEA, que tiene implicaciones directas tanto en la
identificacin como en la intervencin de este alumnado. Sin embargo, poco se sabe si estos
978-84-695-8363-0
602
978-84-695-8363-0
603
encontr que el mayor nmero de aciertos se produca en los tems que hacan referencia a la
Intervencin dentro del aula con el alumnado con DEA (M=68,4%, DT=17,7). No obstante, a
pesar de que el porcentaje de aciertos fue menor en las otras dos categoras de anlisis, ms de
la mitad del profesorado tambin mostr tener conocimientos sobre los Sntomas diagnsticos
(M=58,1%, DT=17,07), as como sobre los Conocimientos Generales de las DEA en lectura y
escritura (M=56,55%, DT=20,1).
Cuando se analizaron los errores cometidos por el profesorado tanto en la escala total
como en cada una de las categoras, los resultados obtenidos reflejaron que por trmino medio
los docentes respondieron de forma incorrecta a un 19,23% (DT=8,34) del total de tems de la
escala. El anlisis de los errores en funcin de las categoras, puso de manifiesto que es en los
tems referidos a los Sntomas/diagnsticos en los que el profesorado present ms errores
(M=22,7%, DT=17,07), seguidos de los tems de Conocimientos Generales (20,1%,
DT=14,12). Sin embargo, fue en los tems de Intervencin sobre las DEA en los que menos
errores cometieron estos profesionales (14,71%, DT=10,42).
Por ltimo, tambin se analizaron los tems que el profesorado dejo sin contestar por
falta de conocimiento. El porcentaje medio del profesorado que ha contestado no se en el
total de los tems de la escala fue del 19,55% (DT=14,97). El anlisis de las lagunas de
conocimiento en cada una de las tres categoras, reflej la misma direccin que en los
anteriores anlisis. Esto es, en los tems en los que el profesorado tuvo menos lagunas de
conocimiento fue en los referidos a la Intervencin (M=18,1%, DT=17,68), seguidos de los
tems incluidos en la categora de Sntomas/diagnsticos (M=19,1%). Asimismo, fue en los
tems sobre Conocimientos Generales en la que estos docentes tuvieron ms lagunas de
conocimiento sobre las DEA (M=23,3%, DT=18,67).
Conclusiones
Los resultados de este estudio evidencian que en general el profesorado tiene
conocimiento sobre las DEA. Sin embargo, este conocimiento parece estar directamente
relacionado con la intervencin mediante estrategias ordinarias en el aula, tales como
fomentar la autoestima y la motivacin, utilizar guas de apoyo, etc., en lugar de estar
relacionados con las causas o especificidad de las dificultades de aprendizaje. Estos resultados
son consistentes con los aportados por otros autores que han encontrado tambin que los
profesores/as no siempre tienen ideas correctas acerca de la naturaleza y los sntomas de la
DEA en lectura (Hudson, High y Al Otaiba, 2007).
Asimismo, los resultados obtenidos tampoco han sido del todo sorprendentes,
principalmente, si consideramos que la mayor parte del profesorado seal no haber tenido
formacin especfica sobre las DEA. No obstante, estos hallazgos nos invitan a la reflexin ya
que sugieren que muchos de los conocimientos que se derivan de la investigacin y recogidos
actualmente en la legislacin educativa de nuestra Comunidad, siguen sin impregnar en la
prctica. Esto puede ser debido a que tradicionalmente los docentes se han centrado de
manera directa en la intervencin y en las adaptaciones que tienen que desarrollar en el aula
para atender a toda la diversidad de los estudiantes. Si bien es cierto, que el proceso de
diagnstico de las DEA y las intervenciones especficas son funciones directas de otros
profesionales, y los tutores/as desempean un papel indirecto, no por ello dejan de tener gran
importancia en la identificacin del alumnado con DEA. Son los primeros en detectar
sntomas de riesgo de una posible DEA, por lo que la exactitud de sus remisiones depender,
en gran medida, de sus conocimientos sobre los sntomas que presenta un alumno con DEA.
978-84-695-8363-0
604
978-84-695-8363-0
605
Resumen
El objetivo de este trabajo ha sido detectar y evaluar alumnado con Trastorno Especfico del
Lenguaje (TEL), as como analizar las posibles dificultades en los principales procesos
lectores, medidos a travs del PROLEC-R (Cuetos, 2009). La muestra se ha obtenido en 19
colegios de la Isla de Tenerife (Canarias, Espaa), en un rango de edad entre los 5 y los 11
aos. Los resultados ponen de relieve muchos problemas en los procesos lectores de los TEL,
especialmente en todo aquello relacionado con aspectos bsicos del lenguaje oral y con la
comprensin. Finalmente, aadir, que se est en proceso de ejecucin de un programa de
intervencin basado en los materiales ALE y Leer en un Clic (Garca de Castro y Cuetos,
2012), cuyo principal eje de actuacin est centrado en llevar a cabo una integracin de lo
ms eficaz de los diferentes mtodos de enseanza de la lectura.
Descriptores: Trastorno Especfico del Lenguaje, evaluacin, intervencin, lectura.
Abstract
The aim of this study is to detect and evaluate students with a Specific Language Impariment
(SLI), and to analyze the possible difficulties in the main reading processes, using PROLEC-R
test (Cuetos, 2009). The sample was obtained in 19 schools on the island of Tenerife (Canary
Islands, Spain). The childrens ages are from 5 to 11. The results highlight many problems in
their reading processes in SLI, especially related to basic aspects of oral language and
comprehension. Finally, we must add, that actually in process is an intervention programme
based on ALE and Leer en un Clic (Garca de Castro and Cuetos, 2012), whose main line of
action is focused on carrying out an integration of the more effective teaching reading
methods.
Keywords: Specific Language Impairment, evaluation, intervention, reading.
30 La presente comunicacin forma parte un proyecto de tesis, enmarcado dentro del Proyecto de
Investigacin: Funciones ejecutivas y lenguaje en alumnado con Trastorno Especfico del Lenguaje. Un modelo
de evaluacin e intervencin con bases psicolingstica y neuropsicolgica (financiado por la Direccin General
de Investigacin y Gestin del Plan Nacional I+D+I. Referencia: EDU2011-27789).
978-84-695-8363-0
606
Introduccin
Trastorno Especfico del lenguaje
El Trastorno Especfico del Lenguaje (en adelante TEL) es una limitacin notable en
la capacidad del lenguaje que padecen algunos nios y nias, teniendo en cuenta que esta
dificultad no est asociada con otros dficits (prdida auditiva, dao cerebral, baja
inteligencia, dficits motores). Adems, el TEL tampoco viene dado por otros factores
ambientales, como pobreza de input, condiciones de vida extremas, privacin afectiva, etc.
Por lo tanto, segn Aguado (1999), estamos ante un dficit de difcil ubicacin dentro
de las patologas del lenguaje, el cual se podra encontrar entre la dislalia (alteracin -omisin,
distorsin o sustitucin- de un fonema) y los trastornos derivados de deficiencia motriz,
intelectual o producidos por dao cerebral.
As, encontramos que una definicin bastante esclarecedora del TEL, la proporciona la
ASHA (American Speech-Language Hearing Association):
Un trastorno de lenguaje es la anormal adquisicin, comprensin o expresin del
lenguaje hablado o escrito. El problema puede implicar a todos, uno o algunos de los
componentes fonolgico, morfolgico, semntico, sintctico, o pragmtico del
sistema lingstico. Los individuos con trastornos del lenguaje tienen frecuentemente
problemas de procesamiento del lenguaje o de abstraccin de la informacin
significativa para almacenamiento y recuperacin por la memoria a corto o a largo
plazo. (ASHA, 1980: 317-318)
As, con una prevalencia del 7,4% de la poblacin de alrededor de 5 aos de edad
(Tombling & Pandich, 1999), y con la posibilidad de estar presente a lo largo de todo el ciclo
vital limitando seriamente el futuro rendimiento acadmico as como al desarrollo
socioemocional del nio, tenemos que los nios y nias con TEL representan un grupo
heterogneo en trminos de su perfil lingstico, pudiendo presentar dificultades en dominios
diferentes del lenguaje, entre los que cabra sealar, el semntico, el morfosintctico, el
pragmtico y el discurso, tanto oral como escrito (Aguado, 1999; Mendoza, 2001; Acosta,
Moreno y Axpe, 2011). Todo ello, posiblemente modulado por alteraciones en diferentes
regiones cerebrales lingsticas.
Los procesos lectores en el TEL
La lectura es un comportamiento complejo, influido por numerosos factores
lingsticos, cognitivos y sociales. Pero, a pesar de sus complejidades es, en gran medida,
dependiente del conocimiento del lenguaje oral (Cruz, 2000).
Las habilidades metalingsticas son habilidades de alto nivel que no slo requieren
comprender y producir el lenguaje de forma comunicativa, sino tambin la capacidad de
separar la estructura del lenguaje de esta intencin comunicativa y de realizar operaciones
mentales sobre esas caractersticas estructurales del lenguaje (Tunmer, Herriman y Neslade,
1988; Cuetos, 2008).
Dentro de las nombradas habilidades metalingsticas encontramos la conciencia
fonolgica, la cual podemos definir como la capacidad de ser conscientes de las unidades ms
978-84-695-8363-0
607
pequeas en las que se puede segmentar el habla. En un mayor sentido, se puede segmentar en
varias habilidades, como la de identificar y manipular las palabras que componen las frases,
llamada conciencia lexical, y las slabas de las palabras, o conciencia silbica, y por ltimo,
la habilidad de manipulacin de las unidades ms pequeas del habla (los fonemas), en la
denominada conciencia fonmica. Todas estas habilidades estn estrechamente relacionadas
con la adquisicin de la lectura (Morais, 1998), por lo tanto, el alumnado con TEL que
presenta dificultades en la produccin de secuencias sonoras, se puede decir que el resultado
son deficiencias en la codificacin de la informacin fonolgica principalmente, pero tambin
problemas en la planificacin, e incluso en la articulacin, de secuencias fonolgicamente
complejas (Cruz, 2000).
La principal tarea para un nio que est aprendiendo a leer en un sistema alfabtico es
comprender cmo los sonidos del habla estn representados en las letras y cmo podemos
realizar las traducciones entre lenguaje escrito y hablado (Liberman et al., 1974).
Las habilidades fonolgicas, implicadas en el conocimiento y la capacidad de analizar
y manipular los elementos que constituyen el lenguaje, se encuentran intrnsecamente
asociadas con la lectura de palabras de un sistema alfabtico transparente, como es el caso del
castellano. En este sentido, la conciencia fonolgica no es una entidad homognea, ya que
estamos haciendo referencia a la conciencia de diferentes unidades lingsticas. (Cruz, 2000).
La adquisicin de la conciencia fonolgica ha sido tradicionalmente considerada como
un continuum con diferentes grados de dificultad. Por lo general, se suelen identificar tres
niveles diferentes: a) la conciencia intersilbica, es decir, la conciencia de que las palabras
tienen, en s mismas, una estructura silbica; b) la conciencia intrasilbica, la conciencia de
que una slaba tiene una parte inicial y una rima, y c) la conciencia fonmica, esta es la
conciencia de que las palabras estn formadas a partir de sonidos individuales o fonemas
(Acosta, Moreno y Axpe, 2011).
Los resultados de los estudios en este campo de Acosta, Moreno y Axpe (2011),
avalan la teora de que la intervencin en conciencia silbica en el conocimiento del nombre
de las letras es de suma importancia dentro del trabajo en el aula; sin embargo, sugieren que
se debe recurrir a una intervencin externa al aula ordinaria cuando se trata de trabajar las
habilidades de conciencia intrasilbica y fonmica, sobre todo cuando se trata del alumnado
con TEL.
El objetivo principal de esta comunicacin es Analizar los resultados de la evaluacin
de los procesos lectores en alumnado diagnosticado con Trastorno Especfico del Lenguaje
(TEL), as como describir un programa de intervencin, cuyo principal eje de actuacin est
centrado en llevar a cabo una integracin de los aspectos ms eficaces de los diferentes
mtodos de enseanza de la lectura.
Mtodo
Presentamos un estudio descriptivo, en el que analizamos los resultados de la
evaluacin de los procesos lectores en alumnado diagnosticado con TEL. Tambin aportamos
las caractersticas principales de un programa de intervencin en lectura.
978-84-695-8363-0
608
Participantes
La muestra de este estudio est formada por 35 escolares de edades comprendidas
entre 5-11 aos diagnosticados con TEL de 19 colegios de la isla de Tenerife. Para su
seleccin se hizo una criba inicial, en toda la Isla de Tenerife (Islas Canarias, Espaa), en
colaboracin con la totalidad de los Equipos de Orientacin Educativa y Psicopedaggica.
Una vez enviados los alumnos que presumiblemente mostraban dificultades en el lenguaje, se
les someta a un proceso exhaustivo de evaluacin para confirmar el diagnstico, mediante la
utilizacin de las siguientes pruebas estandarizadas: CELF-3 (Semel, Wiig y Secord, 1997),
ITPA (Kirk, McCarty y Kirk, 1968), PEABODY (Dunn, Padilla, Lugo y Dunn, 1986) y CI
No Verbal. Se descartaron los casos en el que el CI era inferior a 85, presenten dficits
sensoriales, alteraciones neurolgicas y/o psiquitricas.
Instrumentos
Para la evaluacin de los procesos lectores se ha utilizado el PROLEC-R (Cuetos,
Rodrguez, Ruano y Arribas, 2009). Dicha evaluacin se realiza mediante 9 ndices
principales, 10 ndices secundarios (repartidos entre precisin y velocidad) y 5 ndices de
habilidad lectora. La prueba est pensada para ser aplicada a una poblacin de los 6 a los 12
aos de edad (1 a 6 de Educacin Primaria).
Los puntos de corte para detectar la presencia de dificultad leve (D) o severa (DD) en
los procesos estn representados por los ndices principales y en los de precisin secundarios,
para determinar la velocidad lectora (de muy lenta a muy rpida) tenemos los ndices de
velocidad secundarios, y por ltimo, el nivel lector (bajo, medio o alto).
Los procesos lectores que mide esta prueba son: procesos iniciales de identificacin de
letras, procesos lxicos, procesos sintcticos y procesos semnticos. A partir de su aplicacin
se puede obtener diversa informacin acerca del nivel lector de los sujetos.
Anlisis de datos
Para realizar el anlisis de los resultados del PROLEC-R nos hemos servido del
programa de anlisis de datos estadsticos SPSS 19, incluyendo en este estudio nicamente las
frecuencias y los porcentajes de las variables analizadas.
Procedimiento
Para obtener los datos recogidos con el PROLEC-R, se realizaron sesiones
individuales con cada uno de los participantes, de una duracin de unos cuarenta minutos. A
continuacin, exponemos las principales caractersticas de los programas de intervencin que
se van a iniciar en este ltimo trimestre y se continuarn en el curso acadmico 2013/2014
para completar este estudio.
Actividades para el aprendizaje de la lectura y la escritura (ALE) (Gonzlez y Cuetos, 2008):
Este material est diseado teniendo en cuenta los procesos cognitivos implicados en el
aprendizaje de la lectoescritura. Sus principales objetivos para el alumnado son: entrenar en
habilidades de fluidez y de precisin para lograr una ejecucin adecuada de la lectura; hacer
ms explcitos los procesos cognitivos que se aplican en la escritura. Los contenidos del
programa estn separados en cuatro grandes bloques, a saber: preparacin a la lectura y la
978-84-695-8363-0
609
Frecuencia
Porcentaje (%)
DD
D
N
10
11
9
28,6
31,4
25,7
DD
D
N
4
13
13
11,4
37,1
37,1
DD
D
N
8
15
7
22,9
42,9
20,0
DD
D
N
11
12
7
31,4
34,3
20,0
Nombre de letras
Igual Diferente
Lectura de Palabras
Lectura de Pseudopalabras
978-84-695-8363-0
610
dificultad severa (DD) o leve (D), y como se observa en la tabla, un 37,1% presenta
normalidad (N).
En lectura de palabras, proceso clave en la lectura, nicamente el 20% del alumnado
con TEL presenta normalidad (N) y el 66% de la muestra presenta dificultad leve (D) o severa
(DD), siendo mayor el porcentaje (42,9%) de los que presentan una dificultad leve en esta
tarea.
En cuanto la lectura de pseudopalabras observamos que se repite el porcentaje de
estudiantes con TEL que presentan una dificultad severa (DD) o leve (D), siendo stos un
66% de la muestra, frente al 20,0% que presenta normalidad (N)
Tabla 2
Resultados del bloque de Gramaticalidad y Comprensin
GRAMATICALIDAD Y COMPRENSIN
Tarea
Estructuras Gramaticales
Frecuencia
Porcentaje (%)
DD
D
N
13
12
5
37,1
34,3
14,3
DD
D
N
19
8
3
54,3
22,9
8,6
DD
D
N
16
8
5
45,7
22,9
14,3
Comprensin de Oraciones
Comprensin de Textos
En cuanto a las tareas que hemos agrupado para analizar la gramaticalidad, tenemos
que:
Al asignar los diferentes papeles sintcticos a las palabras que componen una oracin,
en la tarea estructuras gramaticales, comprobamos que los estudiantes con TEL presentan
dificultades (71%) a la hora de realizar el procesamiento sintctico de oraciones con
diferentes estructuras gramaticales, frente a un 14,3% que lo hace con normalidad (N).
En la prueba referente a la comprensin de oraciones, el sujeto debe extraer el
significado de los diferentes tipos de oraciones que se le muestran. En este sentido, los
estudiantes con TEL vuelven a presentar dificultades leves (22,9%) y severas (54,3%), siendo
de nuevo solamente 3 participantes los que logran normalidad (8,6%) en la tarea.
Por ltimo, para realizar la prueba de comprensin de textos, se requieren un buen
nmero de operaciones complejas, tales como la activacin de los conocimientos relacionados
con el texto o la realizacin de inferencias. Como vemos en la tabla II, el 69% de la poblacin
con TEL presenta dificultades (DD / D) en comprender pequeos textos y un 14,3% no, es
decir que llevan a cabo la tarea con normalidad (N).
978-84-695-8363-0
611
Discusin
Parece obvio que el alumnado con TEL presenta problemas en su memoria de trabajo
verbal, y ms concretamente en el mantenimiento de la huella fonolgica que queda en la
misma. Ello ocasiona limitaciones en la representacin fonolgica de las palabras,
circunstancia que afecta tanto a la comprensin como a la adquisicin de nuevas palabras
(Aguado, 1999). En otras palabras, los nios con este trastorno mostrarn una incapacidad del
almacn fonolgico para mantener durante el tiempo necesario la representacin fonolgica
de la palabra, para que otros procesos superiores se produzcan (reconocimiento o
acoplamiento con la representacin del significado, comprensin, razonamiento).
Lo anterior nos hace pensar en que el alumnado con TEL, a pesar de que pueda tener
un buen comienzo en el aprendizaje de la lectura, presenta habilidades de decodificacin que
podran desarrollarse ms lentamente que en sus iguales con normal adquisicin del lenguaje,
debido a que, como hemos explicado antes, poseen unos recursos fonolgicos reducidos
(Cruz, 2000). Esto queda reflejado en los resultados obtenidos en las pruebas de
reconocimiento de letras y de lectura de palabras, ya que como hemos visto, alrededor del
60% de los participantes muestran una dificultad leve o severa en la realizacin de estas
tareas.
Otro aspecto a destacar de nuestros resultados es la existencia de una importante
dificultad para otros aspectos del lenguaje oral ms vinculados a la gramaticalidad, as como a
la comprensin del lenguaje. Todo ello llevar a una pobre comprensin de textos (vemos que
el 70% de la muestra presenta dificultades leves o severas), lo que, segn Cruz (2000),
provoca una deficitaria experiencia lectora debida al fallo a la hora de facilitar el crecimiento
del vocabulario y del conocimiento en general, factores de vital importancia cuando se trata
de la comprensin lectora.
La principal conclusin de nuestros datos habra que establecerla en la necesidad de
intervenir con este alumnado no solamente en habilidades de procesamiento fonolgico, sino
tambin en otros aspectos del lenguaje oral, entre los que cabra resaltar el componente
morfosintctico del lenguaje.
Referencias
Acosta, V., Moreno, A. y Axpe, A. (2011). Anlisis de las prcticas de lenguaje oral y de
lectura inicial en escolares con Trastorno Especfico del Lenguaje en contextos de
familia y aula. Cultura y Educacin, 23(1), 43-56.
Acosta, V., Moreno, A. y Axpe, A. (2012). Implicaciones clnicas del diagnstico diferencial
temprano entre Retraso de Lenguaje (RL) y Trastorno Especfico del Lenguaje (TEL).
Universitas Psychologica, 11(1), 279-291.
Aguado, G. (1999). Trastorno especfico del lenguaje: Retraso de lenguaje y disfasia.
Archidona, Mlaga: Ediciones Aljibe.
American Speech-Language-Hearing Association Commitee on Language, Speech and
Hearing Services in the Schools (1980). Definitions for comumunicative disorders on
differences. ASHA, 22, 317 318.
978-84-695-8363-0
612
978-84-695-8363-0
613
Resumen
El Trastorno por dficit de atencin con hiperactividad (TDAH) est cada vez ms presente
en alumnos de Primaria. A pesar de que estos nios son etiquetados como Alumnos con
Necesidades Educativas Especiales, no siempre reciben la respuesta educativa por parte del
sistema. Para conocer cules son las demandas educativas que piden los padres, se ha
utilizado la Escala de Vida Familiar en una muestra de 11 nios de entre 6 y 12 aos. Los
resultados indican la insatisfaccin por parte de los padres ante las medidas educativas que
se llevan a cabo con sus hijos. Asimismo, establecen la relacin tan importante que se crea
entre necesidades educativas, atencin a la diversidad y calidad de vida.
Descriptores: TDAH, atencin a la diversidad, necesidades educativas.
Abstract
The attention deficit disorder with hyperactivity (ADHD) is increasingly present in
elementary students. Although these children are labeled as students with special educational
needs, they do not always receive the educational response from the educational system. To
know the educational demand, we have used the Family Life Scale in a sample of 11 children
between 6 and 12 years and their families. The results indicate dissatisfaction by parents to
the educational efforts that are carried out with their children. They also establish the
important relationship that develops between educational needs, attention to diversity and
quality of life.
Keywords: ADHD, attention to diversity, educational needs.
Introduccin
El Trastorno por dficit de atencin con hiperactividad (TDAH) es un trastorno de
origen neurobiolgico (Asociacin Balear de Padres de nios con TDAH (STILL), 2000), que
afecta aproximadamente al 5% de la poblacin en edad escolar. Por lo general este trastorno
aparece antes de los 2 aos, aunque en ocasiones no se detecta antes de los 5, incluso puede
retrasarse su aparicin hasta los 7 aos (Ortiz y Agle, 2006). En l hay trastornos perceptuales
y dificultades en el aprendizaje, entre otros. Estos sntomas empiezan a notarse con ms
frecuencia en la educacin primaria. Un alto porcentaje manifiesta problemas con la
lectoescritura, las matemticas, el dibujo, la lateralidad, la ubicacin espacial, la coordinacin
978-84-695-8363-0
614
motora, y discriminar el tamao de los objetos (Vera, Ruano y Ramrez, 2007). Segn
diferentes estudios, no se han encontrado ningn marcador psicolgico o biolgico
patognomnico de la enfermedad (Curran y Taylor, 2000 en Sautullo, 2003).
El TDAH provoca en el nio tres tipos de alteraciones en su conducta o tres subtipos
(Federacin Espaola de Asociaciones para la ayuda al Dficit de Atencin e Hiperactividad.
(F.E.A.A.), 2010; Cardo, 2008; STILL, 2000): hiperactividad, impulsividad e inatencin. El
diagnstico del TDAH est basado en una historia clnica rigurosa y una observacin directa
de quin pasa mayor tiempo con ellos, es decir, profesores o padres. De la Pea, Palacio y
Barragn (2010), sobresaltan la relevancia que presenta que un profesor se recicle
constantemente y reciba nueva informacin para poder trasmitir y poder ensear de manera
segura y fiable, y sobre todo con xito, al nio con TDAH. Es importante que los educadores
orienten y mantengan informados a los padres con alumnos con este trastorno, con el fin de
favorecer el desarrollo integral de estos nios.
No obstante, segn la STILL (2000), para el tratamiento para el TDAH se ha podido
demostrar que el ms efectivo y el produce resultados ms positivos es el tratamiento
multidisciplinar. Para ello, la escuela inclusiva debe basarse en unir esfuerzos y criterios de
evaluacin para definir los avances del alumnado teniendo en cuenta los diferentes contextos
en los que se encuentran para de este modo llegar a la finalidad de la educacin: mejorar la
calidad de vida del alumno (Verdugo, 2009).
Uno de los mbitos que preocupa en lo referente a la calidad de vida de los nios y
adolescentes con TDAH es la relacin que stos poseen con sus padres, madres y/o tutores.
sta relacin se suele caracterizar por el conflicto, ya que un nio con TDAH requiere mucha
ms atencin, son menos cariosos, menos conformistas y por ello piden ms estimulacin
por parte de su referente (Miranda, 1994 en Rosell, Garca, Trraga y Mulas, 2003). Por
tanto, la percepcin de la calidad de vida de las familias con alumnos con TDAH tiene una
importancia muy significativa, ya que va a permitir a establecer las bases sobre el trabajo que
en el que el centro debe basarse, de cara a responder a las demandas educativas que no pueden
cubrirse con la familia como pilar principal.
Por lo tanto, viendo el carcter innovador y pedaggico que se establece al unir
educacin con calidad de vida, y de cara a futuras lneas educativas de intervencin en
alumnado con TDAH, se considera importante analizar cul es el punto de partida sobre el
que apoyar la intervencin educativa.
Mtodo
Participantes
La muestra estuvo compuesta por 11 padres de nios diagnosticados con TDAH. Estos
nios son estudiantes de Educacin Primaria en centros educativos de la Regin de Murcia y
acuden a la asociacin ADAHI de la Regin de Murcia. Los alumnos tienen un rango entre 6
y 12 aos, con una media de edad de 8,81 aos.
Instrumento
Se utiliz la Escala de Calidad de Vida Familiar (ECVF). Este instrumento es una
adaptacin para Colombia hecha por Crdoba, Verdugo y Gmez (2011) de la versin
978-84-695-8363-0
615
original viene de Beach Center University of Kansas (2001). Este cuestionario se ha elegido
por sus propiedades psicomtricas y porque su utilidad ha sido probada en diferentes estudios
(Park et al., 2003; Brown, Anand, Isaacs y Baum, 2003; Crdaba y Verdugo, 2003; Crdoba,
Mora, Bedoya y Verdugo, 2007; Crdoba, Gmez y Verdugo, 2008 en Crdoba, Verdugo y
Gmez, 2011).
Procedimiento de recogida de datos
En primer lugar se acudi al centro educativo y a la asociacin de TDAH de Murcia para
concertar una entrevista con el Director de cada institucin. Posteriormente se tuvo la
entrevista y se plante la investigacin que se quera llevar a cabo y la necesidad de la que
precisbamos. Esta informacin fue trasmitida al departamento de coordinacin pedaggica y
evaluada su idoneidad. Posteriormente se volvi a concertar una cita para administrar los
cuestionarios a los padres. Se aplicaron todos los cuestionarios bajo la presencia del
coordinador de cada institucin.
Resultados
Se hace un anlisis descriptivo de los mismos a travs del paquete estadstico SPSS
(20.0). En la siguiente tabla se muestran los datos descriptivos de la seccin del cuestionario
que hace referencia a los Apoyos y Servicios que la familia y el sujeto con TDAH recibe.
Tabla 1
Datos descriptivos de la seccin: Apoyos y Servicios del ECVF
De la siguiente lista de servicios INDIQUE
Servicios que su familiar con discapacidad necesita y recibe.
Equipo especial para ayudar a su familiar con discapacidad a
vivir, aprender, crecer (ayudas tcnicas y de comunicacin)
Servicios de salud (evaluaciones mdicas, nutricin, enfermera)
Servicios de audicin y/o vista
Fisioterapia o terapia ocupacional.
Servicios del habla o lenguaje
Servicios de educacin especial
Servicios de orientacin y psicolgicos
Apoyo conductual (modificacin de conductas problemticas)
Servicios de transporte y movilidad
Entrenamiento de habilidades de autocuidado (ejemplo: ayuda
con el vestido o uso del bao)
Coordinacin
entre
diferentes
servicios
(Equipo
interdisciplinario)
Servicios de orientacin vocacional o profesional
Servicios de empleo o formacin para el empleo
Si su familiar lo
necesita en la
actualidad
% (n)
NO
SI
63,64
36,36
25
50
25
81,82
18,18
100
100
90,91
72,73
45,45
36,36
81,82
100
9,09
27,27
54,55
63,64
18,18
0
100
66,66
33,32
14,28
50
-
33,33
49,98
57,12
50
-
16,66
28,56
-
100
90,91
9,09
100
72,73
90,91
27,27
9,09
100
100
El 54,55% de las familias encuestadas indican que los sujetos con TDAH necesitan
servicios de educacin especial y de estos el 33,32% reclama no contar con este servicio, y el
49,98% indica que cuenta con algn servicio de educacin especial pero no lo suficiente. En
relacin a los servicios de orientacin y psicolgicos ocurre algo similar. El 63,64% indica
necesitarlos, de los cuales el 14,28% no los recibe y el 57,12% indica recibir alguno pero no
lo suficiente. En cuanto a los servicios que reciben los familiares de los alumnos con TDAH,
978-84-695-8363-0
616
un 45,45% indican necesitar ayuda para pagar los servicios o los apoyos requeridos para las
familias con discapacidad, de estos el 80% indica no recibir esta ayuda y el otro 20% indica
recibirla pero no de manera suficiente.
En relacin a la orientacin y la atencin a la discapacidad que reciben los padres, el
45,45% de los encuestados indica necesitar este servicio, del cul casi la mitad o no lo recibe
o lo recibe de manera insuficiente.
Por otra parte, parece tambin que una parte de los alumnos con TDAH necesita
servicios de habla y lenguaje y apoyo conductual y que en caso, de recibirlo ste no es el
adecuado o no cumple con las necesidades educativas que presenta el alumno. El apoyo
conductual es necesitado en pocos casos. Sin embargo, en los casos donde s es pertinente, en
el 50% de las ocasiones, no se suministra.
Por ltimo, cabe destacar que en las habilidades de la vida diaria, es donde los padres
manifiestan una menor necesidad: transporte y movilidad, habilidades de autocuidado y
servicios de empleo.
Discusin
Los resultados hallados demuestran que una gran parte de las familias consideran que
las personas con TDAH necesitan servicios de educacin especial, y que actualmente, o bien
no cuentan con este servicio o consideran que es insuficiente dadas las caractersticas
particulares que presenta este tipo de alumnado, al menos en la etapa de Educacin Primaria.
Uno de los datos as lo manifiesta. La gran mayora de las familias no est satisfecha con el
apoyo que recibe el nio con TDAH para progresar en la escuela, hecho, que desde el punto
de vista de la LOE (2006), parece impensable, ya que la misma argumenta una educacin de
calidad y equidad para todos o tal y como recoge el Decreto 359/2009, de 30 de Octubre, por
el que se establece y regula la respuesta educativa a la diversidad del alumnado en la
Comunidad Autnoma de la Regin de Murcia. Y no slo el nivel puramente acadmico
queda alterado como tal, sino tambin otra serie de caractersticas asociadas que presentan las
personas con TDAH tales como servicios de terapia ocupacional o fisioterapia, servicios de
habla o de lenguaje, apoyo conductual, entrenamiento en habilidades de autocuidado y
coordinacin entre los diferentes equipos que trabajan en el desarrollo integral del nio.
Asimismo, los servicios psicolgicos y de orientacin que se ofrecen a las familias son
escasos. Estos resultados hallados estn en consonancia con los de Crdoba y Verdugo
(2003), que en su estudio con 24 familias con nios con TDAH, reflejan que existe una falta
de apoyos por parte de toda la sociedad, en parte, debido al desconocimiento de este trastorno.
Adems, uno de los aspectos que ms sorprende, es que segn los padres del mismo trabajo,
reciben informacin muy difusa sobre el diagnstico y la intervencin en nios con TDAH
por parte de los profesionales de la salud y de la educacin, afectando tambin a dimensiones
de la calidad de vida como el apoyo y los servicios a este tipo de familias. Contrariamente a
este estudio, Londoo y Supelano (2009) en un estudio con 15 familias con nios TDAH de
entre 3 y 18 aos describen una mayor satisfaccin general con respecto a la dimensin de
calidad de vida del Apoyo a la persona con discapacidad.
Por lo tanto, parece que pese a los escasos datos encontrados en relacin a la
interaccin entre educacin y calidad de vida, surge la necesidad de una educacin inclusiva
ms significativa, ms involucrada y ms real en el desarrollo del nio con TDAH tanto en la
escuela como en su vida diaria, tanto de los centros educativos como por parte de los padres.
978-84-695-8363-0
617
Referencias
Asociacin Balear de Padres con de nios con TDAH (STILL) (2000). Gua prctica con
recomendaciones de actuacin para los centros educativos en los casos de alumnos con
TDAH. Illes Balears.
Brown, I., Anand, S., Isaacs, B., Baum, N., & Fung, W. L. (2003). Family quality of life:
Canadian results from an international study. Journal of Developmental and
Physical Disabilities, 15(3), 207-230.
Cardo, E. (2008). TDAH: Tipos, Clasificaciones y Examenes Complementarios. Ponencia
presentada en las I Jornadas Andaluzas de T.D.A.H, Sevilla, Espaa.
Crdoba, L. y Verdugo, M.A. (2003). Aproximacin a la calidad de vida de familiares de
nios con TDAH: un enfoque cualitativo. Siglo Cero, 208(34), 19-33.
Crdoba, L., Gmez, J. y Verdugo M. (2008). Calidad de vida familiar en personas con
discapacidad: un anlisis comparativo. University. Psychology, 2(7), 369-383.
Crdoba, L., Verdugo, M.A. y Gmez, J. (2011). Escala de calidad de vida familiar para
familias de personas con discapacidad. Inico.
De la Pea, F., Palacio, J. D. y Barragn, E. (2010). Cartagenas Declaration for Attention
Deficit Hyperactivity Disorder (ADHD): breaking the Stigma. Revista Ciencias de la
Salud,
8(1).
En
http://www.scielo.org.co/scielo.php?pid=S169272732010000100009&script=sci_arttext
Decreto 359/2009, de 30 de Octubre, por el que se establece y regula la respuesta educativa a
la diversidad del alumnado en la Comunidad Autnoma de la Regin de Murcia.
Federacin Espaola de Asociaciones para la ayuda al Dficit de Atencin e Hiperactividad.
(2010). Gua de actuacin en la escuela ante el alumno con TDAH. Cartagena.
Ley Orgnica 2/2006, de 3 de mayo, de Educacin.
Londoo, J. y Supelano, A. M. (2009). Descripcin de la calidad de vida en familias de nios
con trastorno por dficit de atencin e hiperactividad y de nios con autismo. [Tesis
doctoral]. Facultad de psicologa. Universidad La sabana.
Ortiz, J.A. y Acle, G. (2006). Differences in the way parents and teachers identify the
symptoms of attention deficit hyperactivity disorder in mexican children. Revista
Neurologa, 42(1), 17-21.
Park, J., Hoffman, L., Marquis, J., Turnbull, A.P., Poston, D., Mannan, H., Wang, M., &
Nelson, L. (2003). Toward assessing family outcomes of service delivery: Validation
of a family quality of life survey. Journal of Intellectual Disability Research, 47(5),
367-384.
978-84-695-8363-0
618
Rosell, B., Garca, R., Trraga, R. y Mulas, F. (2003). The role played by parents in the
development and learning of children with attention deficit hyperactivity disorder.
Revista Neurologa, 36 (Supl 1), 79-84.
Soutullo, C. (2003). Diagnstico y tratamiento farmacolgico del trastorno por dficit de
atencin e hiperactividad. Medical Clinics, 120(6), 222-226.
Vera, A., Ruano, M.I. y Ramrez, L.P. (2007). Caractersticas clnicas y neurobiolgicas del
trastorno por dficit de la atencin e hiperactividad. Colombia Medical, 38, 433-439.
Verdugo, M. (2009). El cambio educativo desde una perspectiva de calidad de vida. Revista
de Educacin, 349, 23-43.
978-84-695-8363-0
619
Introduccin
A lo largo del da, apenas nos damos cuenta de los innumerables actos que ejecutamos,
debido a que la capacidad para realizar movimientos precisos est muy ligada a la vida
cotidiana. No obstante, solo hay que observar a un nio con una discapacidad fsica
esforzndose en ponerse un calcetn, para apreciar la complejidad de los procesos que
subyacen a la destreza motriz, y la importancia de la adquisicin de habilidades para
aplicarlas en el medio fsico que nos rodea.
La competencia motriz es un requisito previo para acceder al programa escolar y para
integrarse en la vida social de un grupo de amigos (Goldin-Meadows, 1999; Wilson, 2002;
Pine, Lufkin y Messer, 2004). Ahora se sabe que los nios que carecen de competencia motriz
habitualmente no rinden bien en la escuela, suelen estar aislados y pueden desarrollar diversos
problemas ms adelante, pero estos nios no forman un grupo homogneo. Para algunos, la
dificultad de movimiento es algo aislado. Para otros, la falta de coordinacin motriz es solo
una parte de un conjunto de problemas, que pueden afectar al habla, al lenguaje, la lectura, la
atencin y/o problemas de tipo social o emocional. En algunos casos, se puede ofrecer a la
familia un diagnstico claro. En otros casos, el diagnstico no es tan sencillo.
La Batera de evaluacin del movimiento para nios-2 (MABC-2) ha sido
especficamente desarrollada para ayudar a los profesionales que trabajan con nios con
dificultades de movimiento.
La batera MABC-2
La Batera MABC-2 est compuesta por un test estandarizado y una lista de
observacin conductual, adems de un Manual de intervencin ecolgica. Tanto el test como
la lista de observacin conductual se centran en la identificacin y descripcin de la funcin
motriz en el nio, y son complementarios. El test involucra al nio directamente, mientras que
la lista de observacin conductual requiere que un adulto evale la competencia motriz del
nio.
El test estandarizado requiere realizar una serie de pruebas motrices de una manera
estrictamente establecida. Adems, proporciona informacin cualitativa sobre cmo el nio
aborda y realiza las tareas. Est dividido en tres rangos de edad:
o 4 a 6 aos.
o 7 a 10 aos.
o 11 a 16 aos.
978-84-695-8363-0
620
Para cada rango de edad se aplican ocho pruebas agrupadas en tres dimensiones:
destreza manual, puntera y atrape, y equilibrio.
El test proporciona datos objetivos y cuantitativos acerca de la competencia motriz.
Para cada prueba, se proporcionan puntuaciones escalares en franjas de 6 meses para los nios
de 4 aos, y en franjas de 1 ao para los nios de 5 a 16 aos. Para las tres dimensiones y para
la puntuacin total se proporcionan puntuaciones escalares y percentiles en funcin de la
edad. Adems, la puntuacin total se puede interpretar en trminos de un sistema semforo
que designa tres zonas: verde indica un rendimiento dentro del rango normal, mbar designa
zona de riesgo (el nio necesita un seguimiento cuidadoso), y roja indica una clara
disminucin motriz.
Adems de los datos cuantitativos derivados de la aplicacin de las pruebas, pueden
obtenerse varios tipos de descripciones cualitativas, sobre cmo ejecuta el nio cada tarea.
Las observaciones especficas de cada prueba se centran en los aspectos perceptivo-motrices
de la actuacin del nio.
Al final de la sesin, el examinador debe considerar una serie de factores no motores
que podran afectar el movimiento del nio en general (nerviosismo, falta de concentracin,
falta de motivacin y temor a someterse a pruebas que requieren mucho esfuerzo).
Por otra parte, la lista de observacin conductual se centra en el modo en que el nio
realiza las tareas cotidianas en casa y en la escuela. Debe ser aplicada por un adulto que
conozca al nio (maestro, padres, etc.).
Consta de 30 tems agrupados en dos secciones: entorno esttico y/o predecible y
entorno dinmico y/o impredecible. Adems, incluye un apartado de comportamientos que
pueden interferir con la capacidad de ejecutar y aprender habilidades motrices, idntico al
apartado que se recoge en el test. Proporciona una puntuacin motriz total, que se registra en
un sistema tipo semforo, al igual que en el caso del test.
La Batera MABC-2 se utiliza principalmente para:
o La identificacin de dificultades de movimiento.
o La exploracin clnica y la planificacin de la intervencin, proporcionando al
examinador la oportunidad de registrar muchos y diferentes aspectos del
comportamiento de un nio.
o La evaluacin despus de la intervencin.
o La investigacin.
Por lo que respecta al manual de intervencin, presenta al profesional la estructura del
proceso a seguir, con una gua detallada paso a paso, sobre cmo ensear a un nio una nueva
habilidad.
978-84-695-8363-0
621
mbito de aplicacin
Es posible clasificar en cuatro categoras ampliamente definidas a los nios que
pueden beneficiarse de la valiosa informacin que ofrece la evaluacin con la Batera MABC2:
o Nios que no presentan una causa obvia que justifique sus dificultades de movimiento
(ni alteraciones genticas conocidas, ni deficiencias bioqumicas, anatmicas o
sensoriales, ni alteraciones neurolgicas, son intelectualmente capaces, y proceden de
hogares que les brindan buen respaldo). Sin embargo, les resulta extraordinariamente
difcil adquirir las habilidades motrices necesarias para funcionar adecuadamente en la
vida cotidiana.
Durante aos, a estos nios se los ha etiquetado de muchas formas. Hoy da, sin
embargo, existe consenso entre investigadores y profesionales para aceptar la
denominacin Trastorno del desarrollo de la coordinacn (TDC), propuesta por la
Asociacin Americana de Psiquiatra en el Manual diagnstico y estadstico de los
trastornos mentales (APA, 1987; 1994; 2002). Se define el trastorno como una
notable alteracin en el desarrollo de la coordinacin motriz que no es explicable en
trminos de retraso intelectual general o de ningn trastorno neurolgico especfico
congnito o adquirido.
En el siguiente cuadro se presentan los criterios diagnsticos para el TDC
(reproducido del DSM IV-TR, 2002):
978-84-695-8363-0
622
Dimensin Equilibrio:
978-84-695-8363-0
623
Tabla 3
Pruebas aplicadas por rango de edad - Equilibrio
Pruebas
R1 (4-6 aos) R2 (7-10 aos) R3 (11-16 aos)
Equilibrio sobre una pierna
9
Andar de puntillas
9
Saltar sobre alfombrillas
9
Equilibrio sobre un soporte
9
Andar hacia delante taln-punta
9
Saltar a la pata coja en lnea
9
Equilibrio sobre dos soportes
9
Andar hacia atrs taln-punta
9
Saltar a la pata coja en zig-zag
9
Mtodo
Para la adaptacin espaola del test de la Batera MABC-2 se recogi una muestra de
520 nios y adolescentes con edades comprendidas entre los 4 y los 16 aos 11 meses.
Por lo que respecta a la lista de observacin conductual, que tiene un rango de edad de
aplicacin menor (desde los 5 aos hasta los 12 aos 11 meses), la muestra la componen 320
sujetos, los mismos que se recogieron para ese mismo rango de edad en el test.
Con el objetivo de disear una muestra lo ms representativa posible de la poblacin
espaola, se fijaron las proporciones de los grupos muestrales en funcin de los datos del
censo de poblacin del 2001, ltimo publicado por el Instituto Nacional de Estadstica (INE,
2004).
La muestra se estratific en funcin de las siguientes variables demogrficas:
o Edad: Se establecieron baremos por ao de edad. Por lo tanto, un total de 13 grupos de
edad para el test, y 8 grupos de edad para la lista de observacin conductual.
o Sexo: Compuesta por 258 varones y 262 mujeres, distribuidos equilibradamente en los
13 grupos de edad, para el test. Compuesta por 163 varones y 157 mujeres, repartidos
de manera uniforme entre los 8 grupos de edad, para la lista de observacin
conductual.
o Nivel educativo: Se tuvo en cuenta el nivel educativo de los padres o tutores como
representativo de la familia, ya que los sujetos que componan la muestra del test eran
menores de edad. Se establecieron las siguientes categoras: sin estudios, primer grado
(graduado escolar, hasta 2 de la ESO completado, o bachillerato elemental), segundo
grado (bachillerato superior, BUP o FP), tercer grado (diplomatura universitaria,
licenciatura o titulaciones superiores).
o Zona geogrfica: Se distribuy la muestra teniendo en cuenta las diferentes
comunidades y ciudades autnomas, agrupndolas en cuatro grandes zonas: norte
(Galicia, Asturias, Castilla y Len, Cantabria, Pas Vasco, Navarra y La Rioja), este
978-84-695-8363-0
624
978-84-695-8363-0
625
978-84-695-8363-0
626
Referencias
American Educational Research Association, American Psychological Association, &
National Councilon Measurement in Education (1999). Standards for education and
psychological testing. Washington, DC.
American Psychiatric Association. (2002). Manual diagnstico y estadstico de los trastornos
mentales. (4 ed. Texto revisado). Masson.
Angoff, W. H. (1988). Validity: an evolving concept. In H. Wainer & H. I. Braun (Eds.), Test
Validity (pp 19-32). Hillsdale, NJ: Erlbaum.
Barnett, A. L. Parents views of their children movement difficulties using the Movement
ABC-2 Checklist. Unpublished.
Barnett, A. L., & Henderson, S. E. (1998). An annotated bibliography of studies using the
TOMI/Movement ABC: 1984-1996. London: The Psychological Corporation.
Barnett, A. L., & Henderson, S. E. (unpublished). Discriminative validity of the Movement
ABC-2 Test: performance of children with Developmental Coordination Disorder.
Unpublished study, Oxford Brookes University, 2007.
Bayley, N. (1993). Bayley Scales of Infant Development (2nd Ed.). San Antonio: Therapy
Skill Builders.
Beery, K. E. (1967). Developmental Test of Visual-Motor Integration. Chicago, IL: Follett.
(Revised 1997).
Bruininks, R. H. (1978). Bruininks-Oseretsky Test of Motor Proficiency, MN: American
Guidance Service.
Faber, I. R., & Nijhuis van der Sanden, M. W. G. (2004). The Movement Assessment Battery
for Children. Standardisation and reliability of Age Band 5: young adults.
Unpublished manuscript.
Goldin-Meadows, S. (1999). The role of gesture in communication and thinking. Trends In
Cognitive Sciences, 3, 419-429.
Goodenough, F. L., & Harris, D. B. (1963). Childrens drawings as measures of intellectual
maturity. New York: Harcourt Brace.
Graupera, J. L.; Ruiz, L. M.; Gutirrez, M. y Mayoral, A. (1997). Problemas de coordinacin
motriz y resignacin aprendida en Educacin Fsica escolar. Madrid: Ministerio de
Educacin y Ciencia.
Henderson, S. E., & Sugden, D. A. (1992). The Movement Assessment Battery for Children.
London: The Psychological Corporation.
978-84-695-8363-0
627
Larkin D., & Summers, J. (2004). Implications of movement difficulties for social interaction,
physical activity, play and sports. In D.Dewey and D. Tupper (Eds.) Developmental
Motor Disorders: a neuropsychological perspective. New York: The Guilford Press.
Peters, J. M. (2006). Developmental Coordination Disorder (DCD) as a distinct syndrome: A
conceptual and empirical investigation University of London: unpublished PhD thesis.
Piek, J. P., Pitcher, T. M., & Hay, D.A. (1999). Motor coordination and kinaesthesis in boys
with attention deficit-hyperactivity disorder. Developmental Medicine and Child
Neurology, 41, 159-165.
Pine, K., Lufkin, N., & Messer, D. (2004). More gestures than answers: Children learning
about balance. Developmental Psychology, 40, 1059-1067.
Rodrguez, M. L.; Graupera, J. L. y Ruiz, L. M. (2002). Aplicabilidad del test MABC en
escolares con sndrome de Down. Revista Internacional de Medicina y Ciencias de la
Actividad Fsica y el Deporte, 2(7), 221-234.
Ruiz, L. M., Graupera, J. L., Gutirrez, M. y Miyahara, M. (2003). The assessment of motor
coordination in children with the Movement ABC test: A comparative study among
Japan, USA and Spain. International Journal of Applied Sport Sciences,15(1), 22-35.
Ruiz, L. M. y Graupera, J. L. (2005). Un estudio transcultural de la competencia motriz en
escolares de 7 a 10 aos: utilidad de la Batera MABC. Revista Espaola de
Pedagoga, 23, 289-308.
Ruiz, L. M., Graupera, J. L. y Snchez, F. (2000). Anlisis comparativo de diferentes
procedimientos de deteccin de los problemas evolutivos de coordinacin motriz en
los escolares de 4 a 6 aos. Madrid: Ministerio de Educacin y Ciencia.
Ruiz, L. M., Gmez, M., Graupera, J. L., Gutirrez, M., y Linaza, J. L. (2007). A quantitative
analysis of the fifth section of the Henderson and Sudgens Movement ABC Checklist.
International Journal of Special Education, 22(2), 77-85.
Ruiz, L. M., Gomez, M., Graupera, J. L., & Moreno, J. A. (2007). Applicability of a
quantitative version of the Fifth section of the Henderson and Sugdens Movement
ABC Checklist. Physical Education International Journal of Special Education, 22, 2.
Schoemaker, M. M., Smits-Engelsman, B. M., & Jongmans, M. (2003). Psychometric
properties of the Movement Assessment Battery for Children Checklist as a
screening instrument for children with Developmental Coordination Disorder. British
Journal of Educational Psychology, 73, 425-41.
Siaperas, P., Holland, T., & Ring, H. (2006). Discriminative validity of the Movement ABC
Test and Checklist for use with children with Asperger Syndrome (personal
communication).
Stott, D. H., Moyes, F. A., & Henderson, S. E. (1984). Test of Motor Impairment. (Henderson
Revision). Psychological Corporation, San Antonio, Texas; Toronto, Canada; London,
U.K., p.108.
978-84-695-8363-0
628
978-84-695-8363-0
629
Resumen
La sociedad que nos rodea es global y diversa. Nuestras escuelas reflejan fielmente esta
diversidad. En esta comunicacin, proponemos un plan de Atencin a la Diversidad como
marco de referencia en la prctica educativa de los centros de Educacin Infantil y Primaria
que proporcione una respuesta educativa adecuada a todo el alumnado. Los puntos fuertes
del Plan de Atencin a la Diversidad que proponemos son: es un plan orientado a prevenir y
compensar las desigualdades educativas para hacer efectivo el principio de igualdad;
pretende atender y dar respuesta educativa a los alumnos con necesidades especficas de
apoyo educativo donde se ha tenido muy en cuenta a los alumnos inmigrantes. A estas
actuaciones sumamos las llevadas a cabo en el entorno ms prximo e influyente en los
alumnos como es el entorno familiar.
Descriptores: diversidad, heterogeneidad, capacidades, intereses, respuesta educativa.
Abstract
The society that surrounds us is global and diverse. Our schools reflect precisely this
diversity. In this communication, we propose a Diversity Attention plan as a framework of
reference in the teaching practice in the Early Years and Primary Education schools so that it
provides an educative answer for all our students. The main and strongest features of this
Diversity Attention Plan are: it is a plan focused on the prevention and compensation of the
educative inequality for a more effective equality principle; it means to give an educative
answer to the students with special educative needs, especially playing attention to immigrant
students, y to these interventions, we add those carried out in the closest and most influential
surrounding of the students: the family.
Keywords: diversity, heterogeneity, capacities, interests, educative answer.
Introduccin
Una de las peculiaridades que pueden definir a la sociedad actual es el cambio
permanente, acelerado y constante en el que se encuentra inmersa. El avance de los
conocimientos, el progreso de la tecnologa y de la ciencia, las posibilidades reales de
comunicacin y de movilidad a lo largo y ancho del mundo derivan en una cultura de la
globalizacin.
978-84-695-8363-0
630
Algunas aportaciones a la temtica que nos ocupa ya lo hacan hacen autores clsicos
como Cicern y Quintiliano. Cicern (106-43 a. C). Uno de los grandes maestros de la
humanitas, en su obra De officcis, plantea la necesidad de conocer las propias capacidades. En
el siguiente fragmento seleccionado de la obra citada, expone:
Midamos nuestras ocupaciones con la regla de nuestra propia naturaleza; pues a nada
conduce, en efecto, oponerse a la naturaleza ni perseguir algo que uno no pueda alcanzar
(Cicern, De officis, I: 31).
El insigne hispanorromano, Quintiliano (35 a. C 96 d. C) escribe su extraordinaria
obra Institutiones Oratoriae. Reclama la necesidad de conocer bien a los alumnos para llevar
a cabo una educacin adaptativa, es decir, apuesta por una educacin que se adapte a las
capacidades de cada uno.
Encontramos, en la obra de Bowen, un pasaje referido al Programa educativo de
Erasmo, en el que apreciamos toda su postura cuando afirma que La adecuada educacin de
los nios exige maestros con discernimiento, ya que tales nios son individuos con
personalidad propia, que difieren notablemente entre s por sus aptitudes e intereses y
evolucionan tanto mental como fsicamente de acuerdo con ciertas pautas sutiles de desarrollo
que an no se conocen sino de modo imperfecto (Bowen, 1992: 472-473).
Juan Luis Vives (1492-1540), en su obra capital De tradendis disciplinis, sistematiza
conceptos e ideas ya conocidos, enriquecindolos con aportaciones originales. Bowen (1992)
considera que Vives, en esta obra, atribuye a la escuela un papel de primer orden, como
institucin dedicada al cultivo del saber. Reclama para ella, como maestros, a hombres de
probada sabidura, integridad y prudencia. Y con relacin a los alumnos, afirma que Los
nios que se admitan han de demostrar previamente una aptitud para el estudio, lo que no
impide que el maestro sea lo bastante sagaz de discernir las variedades que se den entre sus
alumnos, respetar sus nacientes capacidades individuales y acertar con el estmulo que
convenga a cada tipo de personalidad (Bowen, 1992: 529).
En la obra de Comenio ya aparece esta intencin desde el subttulo de su obra
principal: Didctica Magna que expone el artificio universal para ensear a todos todas las
cosas. Entendemos que se le puede considerar un precedente del principio de la enseanza
comprensiva.
Posteriormente, Rousseau (1712-78) escribe el tratado de educacin por excelencia,
que se ha considerado como el germen de varios postulados de la Escuela Nueva, El Emilio.
Entre sus principios, se aprecia una preocupacin para que la educacin llegue a todos,
tambin para los ms desposedos. Defiende el carcter especfico de la infancia, las
caractersticas distintivas de la niez, reclamando que la educacin debe adaptarse a las
diferentes etapas evolutivas que atraviesa todo ser humano. Y tambin afirmaba: A cada
edad corresponde, por lo tanto, un tipo propio de educacin.
La Escuela Nueva reacciona con extrema dureza en contra de lo que denomin escuela
tradicional. Critica que la enseanza se dirija al alumno ideal, al alumno medio, que esa
enseanza no se personalice en cada sujeto y que el agrupamiento sea homogneo sin tener en
cuenta para ello las caractersticas psicoevolutivas de los educandos.
978-84-695-8363-0
631
Con el objeto de que la Escuela Nueva siguiera creciendo y difundiendo nuevas ideas
se cre, en 1899, la Oficina Internacional de las Escuelas Nuevas, con sede en Ginebra,
dirigida por A. Ferrire con principios coherentes con la atencin a la diversidad, y que en ese
momento representaban una novedad, (Carreo y otros, 2000: 30). Enseanza fundada en la
actividad personal del nio. Consideraciones de los intereses variables con la edad. Trabajo
individual de investigacin. Trabajos libres. Recompensas que propiciasen el desarrollo del
espritu de iniciativa. Educacin de la razn y de la reflexin personal.
No queremos dejar de reflejar las aportaciones que permiten, propician o demandan
una educacin capaz de atender la diversidad en el contexto de la colectividad que representa
el centro escolar, seleccionando algunas de las que consideramos ms significativas: La
enseanza individualizada (Lynch, 1966, Ferrndez, 1978 y 1997), la educacin personalizada
(Garca Hoz, 1975, 1993; Galino y otros, 1991; Prez Juste y Garca Ramos, 1989; PolainoLorente y otros, 1991), la pedagoga diferencial (Jimnez Fernndez, 1987, de la Orden,
1988), la enseanza adaptativa: (Glaser, 1977, Fernndez, 1993, Garca Garca, 1977), el
constructivismo (Coll y otros, 1993; Martn, Mauri y otros, 1996) y el enfoque socio crtico
(Apple, 1986; Carr y Kemmis, 1988; Garca Pastor, 2001).
Situacin actual de la atencin a la diversidad en los centros educativos.
Perspectiva de los profesores
Las dificultades con las que con ms frecuencia se encuentra el profesorado son: La
promocin automtica de los alumnos, la falta de influencia positiva del contexto social para
educar en el esfuerzo y la falta de inters para estudiar por parte de los alumnos. A estos
aspectos que acabamos de mencionar, hemos de aadir: La sensacin de algunos profesores
de ser poco valorados en su trabajo, las exigencias a veces excesivas por parte de la sociedad
y de las familias, la conciencia de las limitaciones personales de los profesores ante las
excesivas demandas, y la heterogeneidad excesiva en las aulas.
Detallamos, a continuacin, las opiniones del Profesorado en torno a la atencin a la
diversidad:
El profesorado, en general, tiene buena disposicin para afrontar los problemas que acarrea
la diversidad en las aulas.
El ambiente de los centros y sus contextos son propicios a las respuestas adaptadas a las
necesidades de todos y cada uno de los alumnos y profesores.
El profesorado, en general no reconoce que est bien preparado para atender a la
diversidad.
Resumiendo: Consideramos que los problemas tienen solucin y que los profesores
tienen buena disposicin. Sin embargo, consideran que se precisan ms medios y ms
recursos personales as como mejor preparacin.
Normativa sobre atencin a la diversidad en las etapas de educacin infantil y educacin
primaria en la Comunidad Valenciana
Existe una normativa general y autonmica para la atencin a la diversidad para la
cual se encuentran los lineamientos y orientaciones para llevar a cabo las actuaciones
vinculadas con la atencin a la diversidad en las etapas de educacin infantil y primaria.
978-84-695-8363-0
632
A continuacin la detallamos:
LEY 13/1982, de 7 de abril, de Integracin Social de los Minusvlidos.
ORDEN de 11 de noviembre de 1994, de la Conselleria de Educacin y Ciencia, por la que
se establece el procedimiento de elaboracin del dictamen para la escolarizacin de los
alumnos con necesidades educativas especiales.
REAL DECRETO 696/1995, de 28 de abril, de ordenacin de la educacin de los alumnos
con necesidades educativas especiales. BOE 131/95 de 2 de junio de 1995.
Decreto 39/1998, de 31 de marzo, del Gobierno Valenciano de ordenacin de la educacin
para la atencin del alumnado con necesidades educativas especiales.
ORDEN de 14 de julio de 1999, de la Conselleria de Cultura, Educacin y Ciencia, por la
que se regulan las condiciones y el procedimiento para flexibilizar, excepcionalmente, la
duracin del periodo de escolarizacin obligatoria de los alumnos y alumnas que tienen
necesidades educativas especiales derivadas de condiciones personales de sobredotacin
intelectual.
ORDEN de 16 de julio de 2001, por la que se regula la atencin educativa al alumnado con
necesidades educativas especiales escolarizado en centros de Educacin Infantil (2 ciclo)
y Educacin Primaria.
ORDEN de 15 de mayo de 2006, de la Conselleria de Cultura, Educacin y Deporte, por la
que establece el modelo de informe psicopedaggico y el procedimiento de formalizacin.
Mtodo
El mtodo empleado es inductivo y analtico. A partir de la observacin de fenmenos
particulares, planteamos la Propuesta de atencin a la diversidad.
Una propuesta del Plan de atencin a la diversidad para las etapas de educacin infantil
y primaria
La propuesta que presentamos a continuacin se distingue de otras en que surge como
producto de la experiencia personal y profesional as como los puntos fuertes del Plan de
Atencin a la Diversidad que proponemos y que detallamos a continuacin:
El P.A.D. est orientado a prevenir y compensar las desigualdades educativas con el
fin de que TODOS los alumnos puedan hacer efectivo el principio de igualdad en el ejercicio
del derecho a la educacin. Atiende y da respuesta educativa a los alumnos con necesidades
especficas de apoyo educativo y adems hemos elaborado un documento marco para los
alumnos inmigrantes que permite coordinar la tarea docente y posibilita afrontar un trabajo
pedaggico coherente a nivel de centro y una continuidad en la actuacin. A estas actuaciones
sumamos las llevadas a cabo en el entorno ms prximo e influyente en los alumnos como es
el entorno familiar, donde es preciso establecer lneas de actuacin confluentes para optimizar
los resultados de la implementacin del mencionado Plan de Atencin a la Diversidad.
0. Justificacin.
978-84-695-8363-0
633
1. Introduccin.
2.
Objetivos.
978-84-695-8363-0
634
procedimientos,
978-84-695-8363-0
635
QUIN
El tutor/a, el profesor/a de
compensatoria, el profesor/a de PT,
o la persona encargada de la
acogida.
CMO
Aplicando las pruebas que
previamente
el
centro
ha
determinado para ambos aspectos
A. Competencia comunicativa
El alumnado procedente de otros pases accede al sistema educativo de la comunidad
con un variopinto bagaje acadmico. En un primer momento es primordial que exista
comunicacin en al menos una de las lenguas vehiculares de la comunidad. Para conocer este
aspecto realizaremos una primera evaluacin lingstica.
De forma general, el Consejo de Europa, en el Marco Comn Europeo de Referencia
para las Lenguas (MCER) establece los siguientes Niveles de Competencia Comunicativa
(N.C.C).
Niveles de competencia comunicativa.
NIVEL A
(Usuario Bsico)
NIVEL B
(Usuario Independiente)
NIVEL C
(Usuario
competente
experimentado
978-84-695-8363-0
636
978-84-695-8363-0
637
978-84-695-8363-0
638
978-84-695-8363-0
639
Resumen
En la universidad, al igual que en las etapas educativas anteriores, es necesario reconocer la
diversidad como una realidad educativa que necesita respuesta acadmica. Por ello, el
alumnado universitario con discapacidad ha de recibir unos servicios y unas prestaciones
iguales a las del resto; slo en caso de que sus necesidades educativas lo requieran, se
debern adoptar medidas extraordinarias, que han sido ampliadas en la normativa
universitaria espaola como consecuencia de la inclusin de los estudios universitarios en el
Espacio Europeo de Educacin Superior (EEES). A continuacin se plantea una revisin
terico-prctica acerca de cules son las principales medidas favorecedoras de la inclusin
que se han de poner en marcha en las instituciones de nivel superior, incluidas las unidades
de atencin al alumnado con discapacidad o unidades de atencin a la diversidad y
concretamente cmo se han ido materializando en la Universidad de A Corua.
Descriptores: Educacin inclusiva, Personas con discapacidad, Educacin superior.
Abstract
At the university, as in the previous stage of education, it is necessary to recognize the
diversity of the students as an educational reality you need academic response. Therefore,
University students with disabilities should receive services and benefits equal to those of the
rest of the student body; only where their educational needs require it, should adopt
extraordinary measures, which have been extended in Spanish university regulations as a
result of the inclusion of University studies in the European higher education area (EHEA).
Then arises a practical review about what are the main measures which promote inclusion
that are to be set up in higher level institutions, including attention to the pupils with
disabilities units or units of attention to diversity and specifically how have be been
materializing in the Universidad de A Corua.
Keywords: Inclusive education, Disabled people, High education.
978-84-695-8363-0
640
Introduccin
Perspectiva o marco terico
La presente comunicacin viene motivada por diferentes condicionantes que
actualmente propician un proceso de cambio en las universidades en torno a la atencin a la
diversidad de alumnado que a ellas accede. En primer lugar, es preciso tener en cuenta que,
como afirman Forteza Forteza (2009), Gmez Jimnez (2002) o Peralta (2007), cada vez es
mayor el nmero de personas con discapacidad que accede a los estudios universitarios. Por
otra parte, en el Informe de la European Association for Quality Assurance in Higher
Education (ENQA, 2005) sobre criterios y directrices para la garanta de calidad en el Espacio
Europeo de Educacin Superior (EEES), se considera inapropiada una aproximacin nica a
los criterios para la garanta de calidad ya que el EEES se caracteriza por la diversidad de
sistemas polticos y educativos, tradiciones socioculturales y educativas, idiomas,
aspiraciones y expectativas. Este aspecto, sealado por Muoz Cantero (2008), hace que las
universidades aspiren a considerar la diversidad como cualidad positiva y no como motivo de
no-reconocimiento o exclusin.
El EEES supone, como sealan lvarez et. al (2011) o Forteza Forteza (2009) una
nueva estructuracin de las enseanzas universitarias, una modificacin en las metodologas
docentes y otra manera de proyectar el aprendizaje del alumnado. Este proceso de cambio
implica por una parte, aplicar el principio de inclusin educativa que repercutir en las formas
de abordar la atencin del alumnado haciendo frente a la evolucin normativa y legislativa y a
las nuevas demandas socioeducativas, como seala Lizasoin Rumeu (2007). No obstante, las
principales acciones recomendadas en la normativa europea, se centran en educacin en
general y no especficamente en el mbito universitario. Por ello, en esta comunicacin nos
centraremos en la normativa a nivel estatal, autonmico y universitario.
Enmarcado en el contexto europeo de Educacin Superior y en el marco legislativo
espaol (desde los que se garantiza la igualdad de oportunidades, la accesibilidad y la
inclusin del alumnado) en la mayora de las universidades espaolas, se cuenta con servicios
o unidades especficas para atender al alumnado con discapacidad (Castellana Rosell y Sala
Bars, 2006; Peralta Morales, 2007; Susinos y Rojas, 2004 y Vieira Aller y Ferreira Villa,
2011), principal agente implicado en la propuesta que se establece a continuacin.
Propsito/objetivos
Los principales propsitos de esta comunicacin se centran en:
-
978-84-695-8363-0
641
Mtodo
Para el primero de los objetivos establecidos, se ha realizado un anlisis documental
de la principal normativa estatal, autonmica y propia de la UDC que se evidencia en el
apartado de resultados as como de la pgina web de la Unidad de Atencin a la Diversidad
(ADI) de la UDC. Para el segundo de los objetivos, se ha desarrollado una lista de chequeo
(check-list) con un formato de respuesta dicotmico (s/no) que incluye un apartado de
observaciones para incorporar aclaraciones, teniendo en cuenta las recomendaciones/objetivos
recopilados en la fase anterior con respecto al mundo universitario.
Resultados
Objetivo 1. Presentar un anlisis de la normativa
Realizando una revisin de la normativa legal de carcter estatal, podemos destacar
medidas que han ocasionado progresos considerables en las universidades respecto a la
discapacidad.
El Real Decreto (RD) 696/1995, de 28 de abril, de ordenacin de la educacin de
alumnos con necesidades educativas especiales, se refiere especficamente a los estudios
universitarios (art. 18) y en l se regulan las primeras medidas para facilitar la accesibilidad y
la igualdad de oportunidades a los estudios superiores para el alumnado con diversidad.
La LOMLOU, Ley 4/2007, de 12 de abril, por la que se modifica la Ley 6/2001, de 21
de diciembre, orgnica de universidades (LOU), realiza varias modificaciones con respecto a
los anteriores apartados de la LOU. As, con respecto al artculo 46, donde sealaba por
circunstancias personales o sociales, incluida la discapacidad ahora matiza por razones de
sexo, raza, religin o discapacidad o cualquier otra condicin o circunstancia personal o
social. Con respecto a la disposicin adicional vigsimo cuarta, ahora recoge medidas como
la igualdad de oportunidades, no discriminacin y medidas de accin positivas para personas
con discapacidad, la promocin de la disponibilidad de medios, apoyos y recursos, la
accesibilidad de edificios, instalaciones y dependencias, incluidos tambin los espacios
virtuales, de acuerdo a la Ley 51/2003, de 2 de diciembre, de igualdad de oportunidades, no
discriminacin y accesibilidad universal de las personas con discapacidad (LIONDAU), y el
derecho a la exencin de tasas de acuerdo a la LISMI (Ley 13/1982, de 7 de abril, de
integracin de los minusvlidos). En la disposicin adicional cuarta indica que las
Administraciones pblicas competentes, en coordinacin con las respectivas universidades,
establecern programas especficos para que personas con discapacidad, puedan recibir la
ayuda personalizada, los apoyos y las adaptaciones en el rgimen docente.
El Convenio marco de colaboracin entre la Conferencia de rectores de universidades
espaolas (CRUE) y el Comit Espaol de representantes de personas con discapacidad
(CERMI), de 20 de noviembre de 2003, intenta regular una accin coordinada entre las
universidades espaolas y los representantes de las personas con discapacidad. Entre sus
lneas de accin se recogen aspectos referentes a la promocin de un entorno universitario
abierto, libre de todo tipo de barreras y universalmente accesible, que garantice la igualdad de
oportunidades y la no discriminacin de las personas con discapacidad en el acceso y
permanencia y progreso en el mbito universitario.
978-84-695-8363-0
642
De acuerdo con la actual Ley 2/2006, de 3 de mayo, orgnica de educacin (LOE), las
enseanzas que ofrece el sistema educativo, incluidas las universitarias, se adaptarn al
alumnado con Necesidad Especfica de Apoyo Educativo (NEAE).
En la Orden PRE/1822/2006, de 9 de junio, por la que se establecen criterios
generales para la adaptacin de tiempos adicionales en los procesos selectivos para el
acceso al empleo pblico de personas con discapacidad, se establece de forma precisa el
aumento de tiempo de ejecucin de exmenes en procesos selectivos dependiendo del tipo y
grado de discapacidad de la persona, normativa que tambin se viene aplicando para aadir
los tiempos de los exmenes en las universidades.
El objetivo de la Ley 39/2006, de 14 de diciembre, de promocin de la autonoma
personal y atencin a las personas en situacin de dependencia es reconocer el derecho a la
autonoma personal y la atencin a la dependencia, para lo que se crea el Sistema para la
Autonoma y Atencin a la Dependencia (SAAD). Es interesante el artculo 19 en el que se
reconoce la prestacin econmica del uso de asistencia personal que tiene como finalidad la
promocin de la autonoma de las personas con gran dependencia.
En el RD 505/2007, de 20 de abril, por el que se aprueban las condiciones bsicas de
accesibilidad y no discriminacin de las personas con discapacidad para el acceso y
utilizacin de los espacios pblicos urbanizados y edificaciones, a pesar de la importancia de
todo el documento, cabe destacar la disposicin final quinta en la que se estipula que a partir
del 1 de enero de 2010, todos los espacios pblicos urbanizados y edificios nuevos deben
cumplir la normativa de accesibilidad.
La Ley 27/2007, de 23 de octubre, por la que se reconocen las lenguas de signos
espaolas y se regulan los medios de apoyo a la comunicacin oral de las personas sordas,
con discapacidad auditiva y sordociegas se centra en la Educacin Superior en los artculos 8,
15 y 17. As indica que las Administraciones pblicas competentes cooperarn con las
universidades y con las entidades asociativas de personas sordas, con discapacidad auditiva y
sordociegas y de sus familiares en el aprendizaje de las lenguas de signos espaolas en otros
mbitos sociales y en el aprendizaje de los medios de apoyo a la comunicacin oral. El
Centro de Normalizacin Lingstica de la Lengua de Signos Espaola contar con
profesionales expertos en lengua de signos espaola y en sociolingstica, y desarrollar sus
acciones manteniendo consultas y estableciendo convenios con los dos agentes comentados
anteriormente.
Cabe destacar el RD 1393/2007, de 29 de octubre, por el que se establece la
ordenacin de las enseanzas universitarias oficiales, (modificado por el RD 861/2010, de 2
de julio), en el cual se indica que entre los principios generales que debern inspirar el diseo
de los ttulos, los planes de estudios debern tener en cuenta que cualquier actividad
profesional debe realizarse desde el respeto y promocin de los Derechos Humanos y de los
principios de accesibilidad universal y diseo para todos (art. 3.5). Con este documento se
recoge la autonoma de las universidades, pero siempre teniendo en cuenta los principios de
igualdad de oportunidades, no discriminacin y accesibilidad universal.
El RD 1892/2008, de 14 de noviembre, por el que se regulan las condiciones de
acceso a las enseanzas universitarias oficiales de grado y los procedimientos de admisin a
las universidades pblicas espaolas establece que dicho acceso se realizar desde el pleno
respeto a los derechos fundamentales y a los principios de igualdad, mrito y capacidad as
978-84-695-8363-0
643
como atendiendo a los principios de accesibilidad universal y diseo para todos. En el artculo
4.2., se recuerda a las universidades que han de respetar los principios de la LIONDAU.
Adems le dedican especficamente los artculos 19, 32, 44 y 51, que se refiere a la reserva de
plazas para estudiantes con discapacidad. En estos artculos se recoge la adaptacin tanto del
contenido de estudio como de las pruebas para estudiantes con diversidad.
Finalmente, el Real Decreto 1791/2010, de 30 de diciembre, por el que se aprueba el
Estatuto del Estudiante Universitario, totalmente centrado en el mbito universitario, dedica
la mayora de los artculos a la atencin a las personas con discapacidad.
De acuerdo a la normativa autonmica, son de destacar el Decreto 35/2000, de 28 de
enero, por el que se aprueba el Reglamento de desarrollo y ejecucin de la Ley de
accesibilidad y supresin de barreras en la Comunidad Autnoma de Galicia. En el captulo
IV se hace referencia a las barreras de comunicacin, que afectan directamente a la
universidad, dado que una de las funciones de los/las docentes es comunicar al alumnado.
Tambin es de destacar el II Plan Gallego de Inclusin Social (2007-2013) en el cual
se indica que para alcanzar una educacin con equidad es imprescindible garantizar la
igualdad de oportunidades para todos/as y prevenir las desventajas educativas en el sistema
escolar. Por este motivo se considera necesario impulsar medidas educativas que permitan
reducir el fracaso escolar, incrementar el nmero de alumnado que sale del sistema educativo
con una formacin cualificada que contribuya a su insercin social y profesional y desarrollar
y ampliar el aprendizaje permanente de la poblacin adulta.
Finalmente, de acuerdo a la normativa especfica de la UDC, destacamos el Estatuto
del estudiantado de la UDC (aprobado por el Claustro Universitario, el 29 de mayo de
2007). Adems, se contempla la existencia de la ADI, creada en febrero de 2004 para atender
a los miembros de la comunidad universitaria (alumnado, profesorado y personal de
administracin y servicios) con necesidades especiales derivadas de discapacidad o de otras
formas de diferencia frente a la poblacin mayoritaria, siendo su cometido principal el de
facilitar su plena integracin.
Las lneas generales de intervencin de la ADI de la UDC se centran en asesoramiento
y sensibilizacin, atencin individualizada, prestacin de ayudas tcnicas, establecimiento de
redes de intercambio de informacin, apoyo mutuo y colaboracin, eliminacin progresiva de
las barreras arquitectnicas y de comunicacin , promocin de derechos y formacin.
Objetivo 2. Elaborar una lista de control en la que se reflejen los aspectos educativos de
la atencin a la diversidad en el mbito universitario
La normativa sealada en las pginas anteriores vino a dotar al Sistema Universitario
de una serie de mecanismos necesarios, cumpliendo as con los compromisos adquiridos en la
Declaracin de Bolonia y, en particular, con el mandato de llevar a cabo la atencin a la
diversidad. Teniendo en cuenta las obligaciones/recomendaciones de la normativa anterior se
ha elaborado la lista de control que se establece a continuacin para el seguimiento de la
atencin a la diversidad en la Educacin Superior.
978-84-695-8363-0
644
Tabla 1
Lista de control para el seguimiento de la atencin a la diversidad en la educacin superior
LISTA DE CONTROL PARA EL SEGUIMIENTO DE LA ATENCIN A LA DIVERSIDAD EN LA
EDUCACIN SUPERIOR
Ley 39/2006, de 14 de diciembre
S No Observaciones
Se facilita desde la universidad la contratacin de asistencia personal, que
facilita al alumnado el acceso a la educacin
Real decreto 505/2007, de 20 de abril
S No Observaciones
A partir del 1 de enero de 2010, todos los edificios nuevos de la universidad
cumplen la normativa de accesibilidad
Real Decreto 1393/2007, de 29 de octubre
S No Observaciones
La universidad dispone de sistemas accesibles de informacin y procedimientos
de acogida y orientacin de alumnado de nuevo ingreso para facilitar su
incorporacin a las enseanzas universitarias
Los sistemas y procedimientos anteriores incluyen, en el caso de alumnado con
necesidades educativas especficas derivadas de discapacidad, servicios de
apoyo y asesoramiento adecuados, que evaluarn la necesidad de posibles
adaptaciones curriculares
Real Decreto 1892/2008, de 14 de noviembre
S No Observaciones
En la universidad se ponen en marcha medidas que consisten en la adaptacin
de los tiempos, la elaboracin de modelos especiales de examen y la puesta a
disposicin del/de la estudiante de los medios materiales y humanos, de las
asistencias y apoyos y de las ayudas tcnicas que precise para la realizacin de
la prueba de acceso, as como en la garanta de accesibilidad de la informacin
y la comunicacin de los procesos y la del recinto o espacio fsico donde sta se
desarrolle
En la universidad, se reserva un 5% de las plazas disponibles para alumnado
que tenga reconocido un grado de discapacidad al 33%, as como para aquel
alumnado con necesidades educativas especiales permanentes asociadas a
circunstancias personales de discapacidad, que durante su escolarizacin
anterior hayan precisado de recursos y apoyos para su plena normalizacin
educativa
En atencin a las personas con discapacidad, en la universidad, cuando no se
oferta una titulacin y centro en la fase extraordinaria, por haberse cubierto la
totalidad de las plazas en la fase ordinaria, pero alguna o algunas plazas de este
cupo de reserva fueron acumuladas al cupo general en la fase ordinaria por no
haber solicitantes suficientes, las universidades aumentan las plazas, hasta
completar el 5%, para que accedan los/las estudiantes con discapacidad de la
fase extraordinaria
Real Decreto 1791/2010, de 30 de dicie mbre
S No Observaciones
El alumnado universitario, independientemente de su procedencia, tiene el
derecho a que no se le discrimine
Se establecen los recursos y adaptaciones necesarias para que el alumnado con
discapacidad pueda ejercer sus derechos en igualdad de condiciones que el
resto de estudiantes, sin que ello suponga disminucin del nivel acadmico
exigido
El alumnado universitario ejerce y promueve activamente la no discriminacin,
como uno de sus deberes
La universidad hace accesibles sus espacios y edificios, incluidos los espacios
virtuales
La universidad pone a disposicin del alumnado con discapacidad medios
materiales, humanos y tcnicos para asegurar la igualdad de oportunidades y la
plena integracin en la comunidad universitaria
La universidad promueve la participacin en programas de movilidad,
nacionales e internacionales, de alumnado con discapacidad, estableciendo los
cupos pertinentes, garantizando la financiacin suficiente en cada caso, as
como los sistemas de informacin y cooperacin entre las unidades de atencin
a este alumnado
Los programas y actividades de tutora se adaptan a las necesidades del
978-84-695-8363-0
645
No
Observaciones
No
Observaciones
978-84-695-8363-0
646
Discusin
La finalidad con la que se ha diseado la propuesta anterior es la de poner a
disposicin de los diferentes grupos de inters de la UDC (responsables acadmicos, personal
de administracin y servicios, personal docente e investigador, estudiantes y sociedad en
general) una herramienta til y flexible, que permita evidenciar los progresos en el desarrollo
de la atencin a la diversidad en nuestra universidad, asegurando su ejecucin efectiva, la
disponibilidad de la informacin pertinente y relevante, detectando posibles desviaciones
existentes, aportando recomendaciones y/o sugerencias de mejora e identificando buenas
prcticas para su difusin posterior. Esta lista de control, efectuada atendiendo a la normativa
legal de referencia, permitir establecer un modelo de autoevaluacin que permita detectar
cules son las principales variables a analizar. Por otra parte, a partir de ella podran
establecerse herramientas de anlisis diferentes en funcin de los agentes implicados, de los
centros a evaluar, etc.; es decir, puede utilizarse como batera de tems que se podrn
seleccionar en funcin del uso al que se destinen.
Referencias
lvarez, S., Cullar, C., Lpez, B., Adrada, C., Anguiano, R., Bueno, A., Comas, I. y Gmez,
S. (2011). Actitudes de los profesores ante la integracin de las TIC en la prctica
docente. Estudio de un grupo de la Universidad de Valladolid. Disponible en:
http://edutec.rediris.es/revelec2/revelec35/
Castellana Rosell, M. y Sala Bars, I. (2006). La inclusin de los estudiantes con discapacidad
en la universidad: un reto para la universidad espaola en el nuevo EEES. Aloma:
Revista de Psicologa, Cincies de lEducaci i de l Esport, 18, 209-228.
ENQA (2005). Criterios y directrices para la garanta de calidad en el espacio europeo de
educacin superior. Helsinki: ENQA.
Forteza Forteza, D. (2009). Los nuevos retos para la intervencin psicopedaggica en los
estudios superiores. Qurriculum. Revista de Teora, Investigacin y Prctica
Educativa, 22, 35-54.
Gmez Jimnez, A. (2002). El apoyo a personas con discapacidad de la UNED desde la
Oficina de Voluntariado. A Distancia, 20(2), 46-51.
Lizasoin Rumeu, O. (2007). Reflexiones en torno a la docencia de la educacin especial en
el contexto universitario: el reto del espacio europeo de educacin superior. Revista de
Ciencias de la Educacin, 209, 101-117.
978-84-695-8363-0
647
978-84-695-8363-0
648
Resumen
Con la reciente implantacin de los grados, en las universidades, se ha pretendido dar a los
estudios universitarios un cariz ms prctico proyectando grupos ms pequeos de trabajo,
subdivisin de tareas, nuevas formas de trabajo en las aulas, intentando generar nuevas y
esperanzadoras expectativas laborales y formativas. Nuestro objetivo en esta contribucin se
centrar en conocer cmo se han desarrollado, metodolgicamente hablando, los estudios
realizados y en ofrecer una aproximacin comparada al mapa de situacin en relacin a las
expectativas formativas y laborales de los estudiantes de los distintos Grados que se cursan
en la Facultad de Educacin de la Universidad de Murcia. Se ha diseado un cuestionario,
que han contestado 195 estudiantes de Grado -en Pedagoga, en Educacin Social, en
Primaria y en Infantil- que presentan, a pesar de los elementos comunes, condicionantes
especficos en sus propias percepciones y en las expectativas generadas de cara a su futuro
formativo y profesional.
Descriptores: metodologa docente, expectativas formativas, expectativas laborales,
estudiantes de Grado.
Abstract
With the recent implantation of new degrees in the university, a more practical teaching
approach including smaller working groups, partition of learning tasks and a new working
methodology in the classroom, has been carried out. The main purpose of this approach is to
generate new and hopeful professional and learning expectations for the students. This article
will focus on knowing how it has been developed from a methodological point of view and to
present a compared analysis of the professional and formative expectations of the students of
the different Degrees taught at the Faculty of Education of the University of Murcia. A
questionnaire has been designed which has been answered by 195 undergraduate students
(Pedagogy, Social Education, Primary and Reception teachers; despite a common footage,
specific conditionings in the perception on the formative and professional expectations
generated by the process have been analyzed.
Keywords: teaching and learning methodology, formative expectations, professional
expectations, undergraduate students.
978-84-695-8363-0
649
Introduccin
Ms all de las particularidades de puesta en marcha y arranque de los Grados en el
panorama universitario espaol, como concrecin de las polticas del espacio europeo de
enseanza superior, la realidad es que lo que pudieran ser las luces de este proceso, choca de
forma casi trgica con la realidad social y econmica que vivimos. No cabe duda que
actualmente, estamos conviviendo, en un mundo educativo complejo donde intereses
personales, profesionales y formativos estn implicados. De hecho, en las universidades, con
la implantacin de los Grados, se ha pretendido dar a los estudios universitarios un cariz ms
prctico proyectando grupos ms pequeos de trabajo, subdivisin de tareas, nuevas formas
de trabajo en las aulas, intentando generar nuevas y esperanzadoras expectativas laborales y
formativas. Esta necesidad ya se haba evidenciado en diversos estudios en los que egresados
universitarios manifestaban como debilidades de su formacin la escasa conexin entre la
teora y la prctica (Gil, Garca y Santos, 2009). El inters se ha centrado, en los ltimos aos,
en el anlisis, desde la perspectiva del graduado de su valoracin acerca de las competencias
desarrolladas con la formacin, as como los puntos dbiles entre formacin y demandas del
mundo laboral (Rodrguez, Prades y Snchez, 2010).
Paralelamente nuestras Facultades se enfrentan a nuevos retos en la gestin y
reconocimiento de requisitos que hacen cada da ms compleja la labor educativa y por ende
administrativa. Tenemos por tanto una serie de factores coyunturales que estn incidiendo de
forma muy poderosa en las expectativas generadas en torno al final de Grado para muchos de
nuestros estudiantes, tanto en su vertiente formativa como laboral. Nuestro objetivo en esta
contribucin se centrar en conocer cmo se han desarrollado, metodolgicamente hablando,
los estudios realizados y en ofrecer una aproximacin comparada al mapa de situacin en
relacin a las expectativas formativas y laborales de la primera promocin de estudiantes
egresados de las titulaciones de Grado de la Facultad de Educacin de la Universidad de
Murcia. Se ha diseado un cuestionario, invitando a participar a los estudiantes
pertenecientes a cuatro titulaciones, Grado en Pedagoga, en Educacin Social, en Primaria y
en Infantil- que presentan, a pesar de los elementos comunes, condicionantes especficos en
sus propias percepciones y en las expectativas generadas de cara a su futuro formativo y
profesional.
No podemos olvidar que los ttulos de grado implicaban en su origen una disminucin del
nmero de alumnos por grupo y una forma de trabajo distinta a la tradicional, es decir, se
invita a trabajar tambin con otras metodologas alternativas favorecedoras de las relaciones
interpersonales y de la formacin integral como persona y como formador.
Propsito y Objetivos
Ante la finalizacin de las primeras promociones (2009-2013) del alumnado que cursa
las titulaciones de grado de la Facultad de Educacin de la Universidad de Murcia queremos
conocer cules son sus expectativas tanto formativas como laborales, as como su nivel de
satisfaccin con la formacin recibida. Este propsito se concreta en los siguientes objetivos
especficos:
Objetivo 1. Identificar los motivos por los cuales el alumnado cree que se implantaron los
grados.
Objetivo 2. Conocer el grado de satisfaccin del alumnado de Grado de la Facultad de
Educacin con la formacin recibida.
978-84-695-8363-0
650
Objetivo 3. Conocer las metodologas cursadas y la opinin de los futuros egresados sobre
la utilidad de las mismas en su formacin actual o futura.
Objetivo 4. Conocer las necesidades de formacin posterior del alumnado de la Facultad
de Educacin y sobre qu aspectos o temticas giran dichas necesidades formativas.
Objetivo 5. Explorar sus expectativas respecto a su acceso al mundo laboral.
Instrumento y procedimiento
El trabajo que presentamos lo encuadraramos dentro de la metodologa emprico-analtica
y ms concretamente en las metodologas tipo encuesta.
Para recoger la informacin se ha utilizado un cuestionario 0N-LINE, que consta de 18
preguntas, con las cuales vamos a intentar dar respuesta los objetivos y/o hiptesis
planteadas. El cuestionario se ha enviado al alumnado a travs de aula virtual de la
Universidad de Murcia y pueden acceder mediante un vinculo creado al efecto en el propio email, siempre se mantiene el anonimato del participante, recibiendo nosotros el cuestionario
previo correo electrnico donde se indica un cdigo y la fecha, se accede mediante el
siguiente enlace:
https://encuestas.um.es/encuestas/encuestas.realizacion.insertar.gen
Distinguimos tres grandes bloques:
a) Preguntas de identificacin (genero, edad y estudios de grado)
b) Preguntas sobre su satisfaccin con los estudios de grado (implantacin, satisfaccin,
metodologas usadas en clase y metodologas de las cuales le gustara recibir formacin,
competencia idiomtica y trabajos fin de grado.
c) Preguntas sobre sus necesidades de formacin futura y acceso al mundo laboral.
El anlisis de los datos se ha realizado con el programa SPSS, versin 19, y tambin se
ha contado con la colaboracin del servicio Encuestas.um.es prestado por ATICA (rea de
las Tecnologas de la Informacin y la Comunicacin de la UMU).
Participantes
La poblacin del estudio son todos los estudiantes de la Facultad de Educacin que
estn cursando actualmente las titulaciones de Grado en Educacin Primaria, Grado en
Educacin Infantil, Grado en Educacin Social y Grado en Pedagoga. Se invit a 4101
personas a participar en el estudio, de las cuales 935 eran del ltimo curso de la titulacin.
Solamente han participado 195 despus de recibir 3 invitaciones, es decir, un 4,75%
aproximadamente. Los participantes se distribuyen de la siguiente forma:
978-84-695-8363-0
651
Tabla 1
Distribucin del alumnado por Grado
Frecuencia
Porcentaje
23
93
51
28
195
11,8
47,7
26,2
14,4
100,0
Infantil
Primaria
Pedagoga
Educacin Social
Total
Tabla 2
Distribucin del alumnado por sexo
Frecuencia
Masculino
Femenino
Total
Porcentaje
37
158
195
19
81
100,0
Frec.
61
115
110
52
42
NO
%
31,3
59
56,4
27,7
30,9
Frec.
116
58
34
113
11
%
59,5
29,7
17,4
57,9
8,1
NS/NC
Frec.
%
18
9,2
22
11
51
26,6
30
15,4
83
61
978-84-695-8363-0
652
ALGO
MUCHO O
BASTANTE
Frec
%
Frec
Frec
46
23,6
84
43,1
65
33,4
44
22,5
78
40
73
37,5
58
29,8
83
42,6
54
27,7
33
11,8
31
15,9
141
72,3
15
7,7
47
24,1
133
67,2
125
64,1
59
30,3
11
5,6
64
37,9
86
44,1
35
17,9
59
30,2
75
38,5
61
31,3
Los resultados obtenidos y que se pueden observar en esta matriz de preguntas son
muy clarividentes, pues queda de manifiesto que las prcticas externas es la materia que el
alumnado piensa que ms les va a aportar en su futuro profesional (72,3%). Igualmente
manifiestan que ahora mismo presienten que tendrn una gran necesidad de formacin una
vez finalizados los estudios (67,2%). Del resto de cuestiones que componen nuestra matriz
informativa un 23,6 % del alumnado manifiesta que las materias que han cursado o estn
cursando durante los estudios les satisfacen poco o muy poco, puesto que no les aportan
mucho ni a nivel personal (22,5%) ni a nivel profesional (29,8 %). Igualmente un 64,4% del
alumnado manifiesta no haber recibido suficiente orientacin en sus estudios para abordar su
futuro formativo y/o profesional. Aunque un 62% considera que la formacin recibida les
puede facilitar entre algo y bastante/mucho el acceso al mundo laboral. Por ltimo indicar
que un 30% est poco o nada satisfecho con los estudios realizados, un 38,5 % est algo
satisfecho y un 31,3 % est bastante o muy satisfecho con la titulacin cursada.
Objetivo 3. Conocer las metodologas cursadas y la opinin de los futuros egresados
sobre la utilidad de las mismas en su formacin actual o futura.
Para solucionar este objetivo hemos planteado dos preguntas, en primer lugar se les ha
planteado qu metodologas han utilizado durante sus estudios, y en segundo lugar les hemos
pedido que valoren su utilidad con vistas a su futuro profesional.
978-84-695-8363-0
653
Tabla 6
Metodologas que se han utilizado en el desarrollo de las clases
NAD
A
La tradicional
La tradicional y algn trabajo en
grupo
Trabajo cooperativo
Trabajo por proyectos
Trabajo por contratos
Trabajo alternativo
Tutora entre iguales
Trabajos tutorizados
Seminario
Otra (Especificar)
POCO
4
7
18
10
ALG
O
40
28
1
35
74
60
50
27
17
23
17
49
28
58
39
69
51
2
36
51
9
22
54
60
75
2
MUCH
O
67
66
BASTANTE
NO LA
CONOZCO
66
84
0
0
71
24
3
4
24
19
23
2
70
20
1
3
8
11
26
5
0
16
80
48
20
9
3
32
Estos resultados contrastan con los que nos proporcionan al preguntarles por su
utilidad en su futura actividad laboral, que recogemos en la Tabla 7, centrando nuestra
atencin en las categoras Bastante o Mucho y No la conozco.
Tabla 7
Metodologas que consideran ms tiles para su futuro profesional
Tradicional
Tradicional y algn trabajo en grupo
Trabajo cooperativo
Trabajo por proyectos
Trabajo por contratos
Trabajo alternativo
Tutora entre iguales
Trabajos tutorizados
Seminario
Otra (indcala en observaciones)
BASTANTE O
MUCHO
Frec.
%
20
10,2
50
25,6
153
78,46
124
65,64
43
22
67
34,35
117
60
100
51,28
75
38,46
5
2,56
NO LA CONOZCO
Frec.
0
0
2
19
79
49
19
13
4
32
%
0
0
1,02
9,75
40,51
25,12
9,75
6,66
2,05
16,41
Del anlisis de estos datos podemos observar que el alumnado demanda un cambio en
tarea docente que estn recibiendo, as por ejemplo pasamos de un 61,5 % de uso de la clase
tradicional en la formacin actual del alumnado de grado en la Facultad de Educacin a
indicar el propio alumnado que en un futuro le ser bastante til slo al 10,2%. Bajada que se
observa tambin en esta metodologa cuando se usa conjuntamente con los trabajo en grupo
(25,6 %).
978-84-695-8363-0
654
%
85
12
49
47
1
43,6
6,2
25,1
24,1
0,5
Entre los que manifiestan una tendencia a seguir estudiando las respuesta son muy
variadas. Piensan completar estudios con algn mster (56,9%) y doctorado (8,2%).
Profundizar en el estudio de los idiomas (65,6%) para mejorar su capacidad lingstica sobre
todo en ingls (80%), aunque consideran bsicos tambien los estudios de frnces y aleman.
Alguno tienen decido estudiar otro grado (23,1%) que complemente sus estudios (Tablas 9 y
10).
Tabla 9
Expectativas formativas
Frec.
Otro grado
Mster
Doctorado
Idiomas
Otros
45
111
16
128
16
23,1
56,9
8,2
65,6
8,2
Tabla 10
Idiomas que te planteas estudiar
INGLS
FRANCS
ALEMN
OTROS
Sin rellenar
Frec.
156
12
7
8
12
%
80
6,2
3,6
4,1
6,2
978-84-695-8363-0
655
%
20
25
39
41
24
6
40
10,3
12,8
20
21
12,3
3,1
20,5
978-84-695-8363-0
656
Tabla 12
Expectativas laborales relacionadas con los estudios de
Grado
La titulacin realizada
a trabajos a fines
a acceder al mundo laboral
Otras
Frec.
117
25
49
4
%
60
12,8
25,1
2,1
Tabla 13
Expectativas temporal de incorporacin al mundo laboral
Frec.
El prximo curso
Dentro de dos aos
Creo que tardar ms de dos
aos
otras opciones
%
39
41
20
21
82
33
42,1
16,9
Conclusiones
Como conclusiones que se derivan del estudio realizado podemos destacar que la
mayora del alumnado piensa que la implantacin de los grados ha tenido algo de
improvisacin, donde ha primado la falta de planificacin y los intereses polticos, siendo
percibido por los estudiantes un menor grado de presencia de criterios propiamente educativos
en el diseo e implementacin de las nuevas titulaciones.
Con respecto a la satisfaccin sobre la formacin recibida, existe una demanda muy
significativa por parte del alumnado y de los centros que los reciben para aumentar el nmero
de horas de prcticas profesionalizadoras. Manifiestan tambin que las prcticas de las
materias deberan ser tambin ms reales. Adems, los estudiantes demandan un mayor uso
de metodologas alternativas en el aula con sus procesos previos de enseanza aprendizaje y
un mayor uso racional de las TIC, porque consideran estas estrategias muy tiles en su futuro
profesional.
El alumnado piensa que la titulacin que obtienen les puede servir para acceder al
mundo laboral pero que deben seguir formndose sobre todo con un mayor dominio de
distintos idiomas, entre los que destaca el ingls, y algn mster u otra titulacin de grado.
Los estudiantes de grado reflejan en sus opiniones la difcil situacin de crisis que
estamos atravesando en la Regin de Murcia y en Espaa. As, el acceso al mundo laboral lo
ven muy complicado en los prximos dos aos, y aunque les gustara trabajar en actividades
propias de sus estudios o afines, no les importa tanto el lugar o ubicacin del trabajo, como
acceder realmente al mundo profesional.
Respecto a la metodologa de encuesta on-line, podemos concluir que la difusin del
cuestionario, recogida y anlisis de datos es rpida y rentable, pero la participacin del
alumnado es menor, por lo que esta dificultad hay que tenerla en cuenta y valorar la prdida
de informacin.
978-84-695-8363-0
657
Referencias
Gil, J., Garca, E. y Santos, C. (2009). Miradas retrospectivas de los egresados sobre la
educacin superior. Revista de Investigacin Educativa, 27(2), 371-393.
Rodrguez, S., Prades, A., Bernldez, L. y Snchez, S. (2010). Sobre la empleabilidad de los
graduados universitarios en Catalunya: del diagnstico a la accin. Revista de
Educacin, 351, 107-137.
Serrano, J. (2012). Aplicacin on-line y tratamiento informtico de cuestionarios. Revista
Espaola de Pedagoga, 70(251), 61-76.
Serrano, M. F. (Coord.) (2012). Aprendizaje cooperativo en contextos universitarios. Murcia:
Editum.
978-84-695-8363-0
658
Resumen
Actualmente, en el marco europeo de la orientacin, acciones vinculadas con la
identificacin de principios y objetivos compartidos entre servicios de orientacin; el
desarrollo de sistemas de garanta de calidad; as como el establecimiento de vnculos ms
prximos entre polticas, investigaciones y prcticas en el mbito orientador son priorizadas.
En este contexto, se enmarca el Proyecto Guidance Innovative Actions and New Tools
(GIANT), desarrollado entre 2008 y 2010, cuyo principal objetivo se centr en transferir y
aplicar un modelo de gestin de servicios orientadores. Sus actividades se dirigieron,
fundamentalmente a servicios de orientacin, implementndose en diferentes fases y
empleando herramientas diversas, pero complementarias entre s. Destacan como principales
resultados, la confeccin de itinerarios metodolgicos y herramientas orientadoras; la
incorporacin de actividades de evaluacin en acciones de orientacin; as como la
integracin de la investigacin para el desarrollo de la calidad de las actuaciones
profesionales en dicho mbito de intervencin.
Descriptores: Orientacin Profesional, Servicios de orientacin, Itinerarios metodolgicos
de orientacin, Herramientas de gestin orientadora, Evaluacin de la calidad de la
orientacin.
Abstract
Nowadays, in the guidance European framework, actions related to the identification of
shared principles and objectives between guidance services; the development of quality
assurance systems; and the establishment of closer links between policies, researches and
practices in the guiding field are prioritized. In this context, the project Guidance Innovative
Actions and New Tools (GIANT) is focused, developed from 2008 to 2010, whose main
objective was to transfer and implement a management model of guidance service. Its
activities were mainly directed to counselling services, implemented in different phases and
using several tools, but complementary to each other. As main results the design of
methodological itineraries and guidance tools, the incorporation of assessment activities in
guiding actions, as well as the integration of research are highlighted in order to develop the
professional activities quality in this area of intervention.
978-84-695-8363-0
659
Introduccin
Las posiciones actuales en el contexto europeo en lo que a orientacin se refiere,
hacen especial hincapi en la necesidad de priorizar acciones basadas en la identificacin de
principios y objetivos compartidos por la totalidad de servicios de orientacin existentes; el
desarrollo de sistemas de garanta de calidad; as como el establecimiento de vnculos
cercanos entre polticas, trabajos de investigacin y prcticas en el mbito orientador;
acciones que pueden favorecerse por la coordinacin de polticas relevantes de cooperacin
entre diversos sectores para posibilitar la orientacin y el cumplimiento de los servicios
regionales y locales, as como asegurar la igualdad de beneficios a toda la ciudadana
(CEDEFOP, 2006).
Es en este contexto en el que se enmarca el Proyecto GIANT (Guidance: Innovative
Action and New Tools), como continuacin del Proyecto GIRC (Guidance Innovation Relay
Centers), aprobados y financiados por la Comisin Europea en el Programa Aprendizaje a lo
largo de la vida Subprograma Leonardo da Vinci- [2007-2013] Proyectos Multilaterales-,
entre los que existe una estrecha vinculacin, a pesar del enfoque ms prctico del segundo en
relacin con su predecesor, ya que el Proyecto GIANT es el seguimiento y aplicacin del
anterior, centrado en la identificacin y diseo de herramientas de conexin de la orientacin
para ser implementadas en una experiencia investigadora posterior, constituyendo sta el
objetivo fundamental del presente trabajo.
De este modo, el Proyecto GIANT (2008-2010) se dise con el objetivo de transferir
y aplicar un modelo para la gestin y conexin entre los servicios de orientacin existentes en
diferentes contextos italianos (Regin de Friuli-Venezia Giulia, Regin de Marche, as como
las provincias de Miln y Bolonia). A estas instituciones se unieron cuatro socios adicionales,
pertenecientes a tres pases (Italia, Espaa y Rumana), configurando la totalidad de socios
participantes.
Con el propsito de favorecer dicho cometido, el Proyecto GIANT concentra su
trabajo en tres fases, centradas fundamentalmente en el ajuste del modelo, en compartir
metodologas y herramientas de apoyo entre los orientadores de los diversos sistemas, as
como en la implementacin del modelo. En consecuencia, tomando como referente las
diferentes etapas, se obtienen diversos resultados, destacando la confeccin de itinerarios
metodolgicos y herramientas orientadoras; la incorporacin de actividades de evaluacin en
las acciones de orientacin; la elaboracin de un plan y modelo de evaluacin global y
procesual de las funciones orientadoras; la aplicacin del dispositivo orientador en contextos
concretos; as como la integracin de la investigacin para el desarrollo de la calidad de las
actuaciones profesionales en el mbito de la orientacin. Complementariamente, destaca el
estudio de viabilidad llevado a cabo y el proceso de evaluacin del proceso de transferencia
adoptado por el grupo de trabajo con el propsito de favorecer su aprovechamiento en el
marco europeo de referencia.
Todos estos aspectos son las cuestiones a abordar en el presente trabajo, cuya finalidad
bsica se centra en dar a conocer los principales aspectos de una experiencia investigadora
978-84-695-8363-0
660
978-84-695-8363-0
661
Desde los planteamientos anteriores, ambos proyectos se han integrado dentro de las
perspectivas estratgicas europeas que han tenido como objeto lograr la estrecha interrelacin
y complementariedad de los sistemas regionales de orientacin a partir de la creacin de un
entorno institucional sostenible y favorable para promover la convergencia de acciones para la
construccin de sistemas conforme a criterios de igualdad, eficiencia y calidad (CEDEFOP,
2008).
Destinatarios, contexto y mbitos de orientacin
Los destinatarios de las actividades del Proyecto fueron jvenes menores de
veinticinco aos en situacin de insercin socio-laboral, de habitual referencia en las acciones
de orientacin profesional, por identificarse este colectivo como uno de los sectores de la
poblacin con ms necesidades en la materia, y sobre el que ms incide el paro en el contexto
europeo actual. No obstante, desde el Proyecto tambin se hace hincapi en considerar que los
cambios progresivos sociales y econmicos requieren repensar las prcticas tradicionales en
orientacin: los itinerarios de la carrera individual, cada vez ms fragmentados y articulados,
requieren que las personas desarrollen habilidades para pensar en su proyecto de vida, no
tanto ya como un camino lineal y ascendente, sino como un conjunto de micro-elecciones que
requieren habilidades especiales de adaptacin a un contexto especfico. Como consecuencia,
las acciones de orientacin para la carrera deben apoyar a las personas para desarrollar sus
capacidades y su independencia en la gestin de su proceso permanente de auto-orientacin.
Esta funcin se extiende a todos los sistemas en los que los jvenes menores de veinticinco
aos puedan transitar, como son la educacin, la formacin profesional y el empleo.
Como se ha indicado anteriormente, el contexto en el que se realizaron las actividades
del Proyecto fue el italiano, implementndose, concretamente a nivel regional en FriuliVenezia Giulia y Marche y, a nivel provincial en Bolonia y Miln.
Los mbitos de actuacin fueron el educativo, la formacin profesional y el laboral.
De forma especfica y de acuerdo con las necesidades orientadoras identificadas previamente
en cada zona, los objetivos generales de orientacin trabajados fueron los siguientes:
-
978-84-695-8363-0
662
978-84-695-8363-0
663
978-84-695-8363-0
664
otra parte, ste ha dado lugar a grandes expectativas entre profesionales y usuarios,
plenamente cumplidas en las reas implicadas por la accin.
No hay evidencias para argumentar de forma estructurada, la futura eficiencia de la
sostenibilidad de los procesos considerados mediante los indicadores propuestos por los
miembros del Proyecto; aunque las perspectivas parecen ser positivas y favorables. La
sostenibilidad en el futuro es analizada en referencia a los siguientes niveles de anlisis:
-
978-84-695-8363-0
665
Usuarios (estudiantes)
Destinatarios
Instrumentos, herramientas y
recursos
Criterios de evaluacin
Caractersticas
Parte A: emociones
Parte B: comprensin e intereses
Output
Parte A: implementacin de la
expectativa
Parte B: satisfaccin y percepcin
de utilidad
Parte C: valor de la oferta de
orientacin de la institucin
Parte A: participacin
Parte B: satisfaccin
Parte C: servicios pblicos
Parte D: eleccin de la formacin,
aprendizaje adquirido y
proactividad
Seguimiento (regin
Friuli-Venezia Giulia)
Criterios transferibles y
viables
978-84-695-8363-0
666
Cuadro 2
Evaluacin del proceso de transferencia (orientadores, padres, grupo control)
Grupo control
Padres
Orientadores
Destinatarios
Criterios de evaluacin
Input
Proceso
Output (valoracin de
diferentes tems)
Output
Input
Output
Seguimiento
Conclusiones
Las posiciones ms actualizadas en el contexto europeo en lo que a orientacin se
refiere, hacen especial hincapi en la necesidad de priorizar acciones basadas en la
identificacin de principios y objetivos de los servicios de orientacin existentes.
En esta lnea, el desarrollo del Proyecto GIANT hizo posible un esbozo de las
implicaciones para la orientacin profesional en el sistema de servicios a nivel europeo; ha
sido una verdadera oportunidad para promover la buena coordinacin entre los diferentes
sectores (escuela, formacin profesional y trabajo), y la coherencia entre los servicios
regionales y locales, mejorando as la calidad en la orientacin para la carrera y diseando
herramientas de apoyo para facilitar la transferencia del modelo.
Referencias
AA. VV. (2007). Manual GIRC. Procesos para una Orientacin de Calidad. Bucarest: AFIR.
AA. VV. (2010). GIANT Project Partnership. Orientacin: acciones e instrumentos para la
integracin de sistemas. Roma: Carocci.
978-84-695-8363-0
667
978-84-695-8363-0
668
Resumen
El trabajo que presento consiste en una experiencia prctica llevada a cabo en el primer nivel
del primer ciclo de secundaria de un IES. La he realizado durante la segunda evaluacin
despus de observar en el aula de apoyo la presencia de ciertos niveles de violencia y de
conductas inadaptadas en el perodo comprendido entre septiembre y diciembre (1 evaluacin).
Quiero destacar en mi trabajo la importancia de la identificacin por parte del profesor y del
grupo de alumnos que forman parte de la muestra del presente estudio, de las conductas
percibidas como inadaptadas en el aula como parte fundamental de la metodologa de esta
investigacin. Esta experiencia se ha llevado a cabo con un total de 12 alumnos de 1 de ESO, 6
de los cuales mostraban conductas violentas e inadecuadas en el aula de apoyo. Tras el
compromiso de padres, profesor y alumnos se decidi aplicar una tcnica de modificacin de
conducta que consisti en la realizacin conjunta y cooperativa de la valoracin e identificacin
de las conductas que considerbamos que eran ms frecuentes y perjudiciales para el buen
funcionamiento del aula. A partir de este momento los alumnos redactaron guiones escritos con
los dilogos que solan acompaar dichas conductas, posteriormente los escenificaron y los
comentamos en clase. El resultado de esta investigacin ha sido muy satisfactorio pues los
alumnos se implicaron desde el primer momento en la experiencia, obtuvieron mayores niveles
de compromiso en su cambio de conducta y las conductas disminuyeron en un perodo breve de
tiempo, mejorando as los resultados acadmicos de todos los alumnos en la 2 evaluacin.
Descriptores: Metodologa; Modificacin de conducta; Actitudes inadecuadas; Cooperacin;
Atencin a la diversidad.
Abstract
The present work is a practical experience carried out in the first level of the first cycle of
secondary education institutions. I've done it during the second assessment period, alter, having
observed observing in the support classroom the presence of certain levels of violence and
inappropriate behaviour in the period between September and December (1st term). I want to
emphasize in my work the importance of the identification by the teacher and the group of
students who are part of the sample of this study of perceived as maladaptive behaviour in the
classroom as an essential part of the methodology of this research. This experiment was carried
out with a total of 12 students of 1st ESO, 6 of whom showed violent and inappropriate
behaviour in the support classroom. Following the commitment of parents, teacher and students,
it was decided to implement a behaviour modification technique which consisted of conducting
cooperatively and jointly and the assessment and identification of the behaviour we thought were
more frequent and harmful to the proper functioning of the classroom. From that moment, the
students wrote griten scripts with the dialogues that usually accompany these behaviours, alter
that, they performed and discussed them in class. The result of this research has been very
978-84-695-8363-0
669
successful because the students were involved from the outset in the experience, they had higher
levels of engagement in behavioural change and the behaviors dropped within a short period of
time thereby improving the academic performance of all students in the 2nd term (assessment
period).
Keywords: Methodology; Behaviuor modification; Inappropiate attitudes; Cooperation; Special
education.
Introduccin
En el presente estudio una de las principales preocupaciones a la que nos hemos
enfrentado ha sido la de dar respuesta a las siguientes cuestiones:
El sistema educativo da respuesta a todos los alumnos en igualdad de condiciones?
Impartimos una docencia preparatoria de futuros profesionales y ciudadanos en igualdad de
oportunidades para todos los alumnos?
Preparar a los futuros ciudadanos es uno de los fines del sistema educativo, a su vez, la
sociedad demanda cada vez ms ciudadanos que dominen diferentes habilidades o destrezas:
sociales, capacidad de tomar iniciativa, ser flexibles, ofrecer nuevas ideas y trabajar en equipo.
En definitiva, desde nuestro punto de vista, desde los centros escolares deberemos ofrecer
a los estudiantes una enseanza de calidad para todos y cada uno de ellos.
Por otra parte, en los ltimos tiempos el profesorado est siendo testigo directo de unas
tasas elevadas de fracaso escolar, en Espaa ronda el 30%. Estos datos son alarmantes pues
ponen de manifiesto que 3 de cada 10 alumnos no consiguen obtener el ttulo de graduado en
ESO o que, adems, abandonan el centro educativo antes de conseguirlo.
Estos datos son similares a perodos anteriores a la implantacin de la LOGSE, en los
cuales: exista gran fracaso escolar en 1 y 2 de BUP y un fracaso y abandono, tambin en el 1
Ciclo de FP. Pero, entonces cul es el problema?
Nos encontramos ante una situacin compleja, puesto que se ve influenciada y
determinada por un gran nmero de variables que intervienen en el sistema educativo como
podran ser: aspectos metodolgicos, motivacionales del alumno, curriculares, socio-familiares
Que causan conductas conflictivas hacia el profesor y hacia su propio fracaso escolar.
Mtodo
La metodologa que hemos desarrollado en el presente estudio y que hemos llevado a la
prctica en el aula de apoyo de un IES ha seguido las directrices de las tcnicas conductistas que
estn basadas en la modificacin de conducta. Segn dichas tcnicas hemos llevado a cabo un
programa de prevencin, intervencin y tratamiento de los problemas del desarrollo de la
personalidad adolescente referidos a los comportamientos que hemos considerado ms
frecuentes e inadecuadas en el aula.
978-84-695-8363-0
670
Comer en clase
Decir palabrotas
Levantarse de la mesa sin permiso cuando el profesor est explicando (para cambiar de sitio,
pasear o tirar papeles)
978-84-695-8363-0
671
Tabla1
Conductas leves
Conductas contrarias a las normas de convivencia
2
3
Conductas graves
En relacin a las conductas leves hemos considerado que podran ser las siguientes:
sacar el mvil y decir palabrotas. En cuanto a las conductas contrarias a las normas de
convivencia que aparecen en la tabla 1 seran las de comer en clase, llegar tarde al aula y hablar
durante largos perodos de tiempo. Por ltimo, insultar a los compaeros y al profesor y
levantarse de la mesa cuando el profesor est explicando las hemos considerado conductas
graves.
En la Figura 1 se muestran los resultados acadmicos de los alumnos seleccionados en
nuestro trabajo durante la primera evaluacin en las diferentes asignaturas de 1 ESO (sin tener
en cuenta optativas). Seran un total de ocho asignaturas: naturales, sociales, lengua,
matemticas, plstica, tecnologa, gimnasia e ingls. Y, tambin, los resultados obtenidos por
nuestros alumnos objeto de estudio durante la segunda evaluacin. Por otra parte, hemos de
recordar que los alumnos son de diferentes primeros de ESO, de esta forma habra tres alumnos
en 1 A, dos alumnos en 1 B, tres en 1 C y cuatro en 1 D, respectivamente.
Los alumnos que aparecen en la figura 1 estn ordenados de acuerdo al curso al que
pertenecen del 1 al 12, o lo que es lo mismo, de 1 A a 1 D.
Figura 1
978-84-695-8363-0
672
Discusin
Las caractersticas principales de un programa de modificacin de conducta son las
siguientes: que est centrado en lo observable, que evala la conducta a modificar, que controla y
evala los efectos del programa y, que slo le interesan los cambios conductuales socialmente
significativos.
Por otra parte, las fases de un Programa de Modificacin de Conducta seran las
siguientes:
1. Definicin de la conducta: que consiste en una descripcin clara y objetiva de la conducta
objeto de estudio, por tanto habra que huir de las etiquetas. En nuestro caso las conductas a
modificar han sido las de: comer en clase, sacar el mvil (y chatear), llegar tarde al aula (incluso
ms de quince minutos), insultar a los compaeros y al profesor, decir palabrotas, levantarse de
la mesa sin permiso cuando el profesor est explicando (para cambiar de sitio, pasear o tirar
papeles) hablar en clase durante largos perodos de tiempo.
2. Especificacin de objetivos: esto es, lo que el sujeto es capaz de hacer, stos deben ser
adecuados a las posibilidades reales de los sujetos. Nuestro principal objetivo era la disminucin
de algunas de estas conductas, en el peor de los casos, y la extincin de tales conductas como
objetivo a largo plazo.
3. Valoracin del sujeto: debemos cuantificar la conducta (a travs de la observacin) y del
ambiente que rodea la conducta (familia, centro, alumno) de todos los sujetos de la muestra.
4. Intervencin: en esta fase: podemos predecir el cambio en la conducta (modificando
causas/consecuencias), usando reforzadores sociales, gustos, intereses..., y tambin podemos
determinar el lugar/las condiciones de intervencin. En esta fase hemos elegido como lugar de
intervencin el aula de apoyo.
5. Procedimientos de intervencin: El procedimiento que hemos llevado a cabo en nuestra
investigacin es la elaboracin de vdeos y su posterior comentario que ha servido de reforzador
positivo pues los sujetos se han sentido protagonistas del cambio en su conducta haciendo que
stas disminuyan y, adems mejorando su rendimiento acadmico, tambin se ha utilizado
reforzadores sociales por parte de los compaeros y los profesores que hemos participado en la
investigacin.
6. Seguimiento: en esta ltima fase hemos comprobado que el programa funciona pues las
conductas inadecuadas han disminuido en el aula de apoyo, mejorando con ello el clima de
trabajo en el aula y las relaciones interpersonales profesor- alumnos, alumno-alumno y
mejorando el rendimiento acadmico de la mayora de los alumnos. En ningn caso se ha visto
disminuido.
Referencias
Aierbe Barandiaran, A. (2005). Intervencin Psicopedaggica en los trastornos del desarrollo.
Mlaga:Aljibe.
Belloch, A., Sandn, B. Y Ramos, F. (2008). Manual de psicopatologa. Volumen I. Madrid: Mc
Graw Hill.
978-84-695-8363-0
673
Belloch, A., Sandn, B. Y Ramos, F. (2008). Manual de psicopatologa. Volumen II. Madrid: Mc
Graw Hill.
Daz-Aguado, M.J. (1996). Escuela y tolerancia. Madrid: Pirmide.
Goleman, D. (2006). Inteligencia social. La nueva ciencia de las relaciones humanas.
Barcelona: Kairs.
Kelly, J.A. (2000). Entrenamiento de las habilidades sociales. Bilbao: Descle De Brouwer.
Mndez, F. y Maci, D. (1990). Modificacin de conducta en nios y adolescentes. Madrid:
Pirmide.
Milln, M. (1996). Psicologa de la familia: Un enfoque evolutivo y sistmico. Valencia:
Promolibro.
Palacios, J., Marchesi, A. y Coll, C. (1991). Desarrollo psicolgico y educacin. Madrid:
Alianza.
Prez Snchez, A.M. y Castejn Costa, J.L. (2000). Inadaptacin escolar: Intervencin
Psicopedaggica primaria. Alicante: ECU.
978-84-695-8363-0
674
Resumen
El pster presenta los resultados parciales de una investigacin que tiene como objetivo
profundizar en el proceso de transicin a los estudios de mster oficial del rea de
educacin. El estudio se ha desarrollado a travs de cuestionario (versin papel y on-line). El
instrumento incluye las siguientes dimensiones de anlisis: trayectoria acadmica y laboral
previa; motivos y expectativas respecto al mster e integracin acadmica y satisfaccin con
los estudios. Han participado 146 estudiantes de un total de 12 msteres oficiales del rea
educativa de la Universitat de Barcelona (UB) y de la Universitat Autnoma de Barcelona
(UAB). Los resultados ponen de manifiesto que la formacin de mster se consolida como un
espacio de formacin y de desarrollo profesional para los graduados universitarios,
incrementandose, ao tras ao, el nmero de estudiantes matriculados. Este aumento ha
propiciado la aparicin de tres tipologas de estudiantes con especificidades en cuanto a: (1)
la experiencia profesional previa y formacin; (2) eleccin de los estudios y sus objetivos y
expectativas a corto y largo plazo; y (3) necesidades de orientacin en el proceso de decisin
previo al acceso como en su posterior insercin profesional.
Descriptores: motivaciones y expectativas, mster, trayectorias y universitarios.
Abstract
This paper presents a research that have a main objective to deepen the process of transition
to official master studies in the area of education. The study was done by questionnaire (hard
copy and on-line). The instrument includes the following dimensions of analysis: academic
and previous work, motives and expectations of the master and academic integration and
satisfaction about the studies. Have participated 146 students in a total of 12 official master
of the educational area from the Universitat de Barcelona (UB) and the Universitat
Autnoma de Barcelona (UAB). The results show that the master training is consolidated as
training and professional development for college graduates, increasing year by year, the
number of students enrolled. This increase has led to the emergence of three types of students
with specific regard to: (1) previous professional experience and training, (2) choice of
studies and their objectives and expectations in the short and long term, and (3) in as for your
orientation needs in the decision process prior to access and in subsequent employability.
Keywords: motivations and expectations, master studies, careers and college students.
978-84-695-8363-0
675
Introduccin
El debate conceptual y operativo en torno al estudio de las trayectorias universitarias
en los ltimos aos ha llevado a establecer un marco de comparacin y anlisis de la medicin
de los conceptos vinculados a la permanencia, la retencin y la graduacin, indicadores, todos
ellos, clave de la eficiencia de los sistemas universitarios (Mortenson, 2013). En el marco
internacional contamos con un corpus de conocimiento amplio, desarrollado al amparo del
inters de las universidades por optimizar los niveles de excelencia, que ha puesto de
manifiesto algunos principios clave. En primer lugar el hecho, confirmado, de la complejidad
conceptual y operativa de los procesos de persistencia y graduacin. Y, en segundo lugar, la
existencia de situaciones o tipologas producto de diferentes realidades. Las trayectorias
finales son, como indican las investigaciones, producto de una interaccin a lo largo del
tiempo de factores institucionales y factores personales (Figuera y Torrado, 2013).
El inters de los investigadores se ha centrado, casi exclusivamente, en los estudios
universitarios de grado. Los resultados de las investigaciones confirman que las experiencias
iniciales de los estudiantes -incluido el contraste de expectativas y motivaciones con la
realidad- contribuyen a explicar la adaptacin a la universidad y el logro acadmico a ms
largo plazo (Krause y Coates, 2008; Yorke y Longden, 2008). No obstante, se reconoce la
necesidad de investigar la relacin entre persistencia en el primer ao y graduacin, as como
profundizar en los factores determinantes de la persistencia en aos posteriores. El trabajo
pionero de Nora y Crips (2012), en EEUU, y la tesis doctoral de Torrado (2012), en Espaa,
confirman perfiles diferenciales en las trayectorias de no persistencia cuando se considera el
tiempo o ao de abandono. Es razonable suponer que la fuerza y la direccin de los factores
que influyen en el comportamiento de no persistencia pueden cambiar con el tiempo (Ishitani,
2008).
Sin embargo, el inters por el estudio de la transicin en el primer ciclo contrasta con
la ausencia de investigaciones en el nivel de mster, a pesar de la importancia cuantitativa y
cualitativa que est adquiriendo este nivel educativo. Los datos oficiales de los institutos de
estadstica en el contexto espaol muestran el incremento progresivo en el acceso a los
msteres desde su implementacin el ao 2006/07. En el curso 2008/09 haba 46.523 alumnos
matriculados en msteres oficiales en Espaa, cifra que se incrementa hasta 89.139 en el curso
2010/11. En Catalua, durante el curso 2006/07, se ofertaron 191 msteres con 3.566
estudiantes, cifra que aument en el curso 2007/08 a 379 msteres con 7.725 estudiantes.
Varios son los motivos que explican el incremento en la oferta y demanda de estos
estudios universitarios. El primero es su valor en el mercado de trabajo: los cambios rpidos y
la necesidad de innovacin obligan a un proceso permanente de formacin por parte de los
profesionales en activo. El segundo es el cambio en los patrones de desarrollo de la carrera de
las personas adultas, en general, y de los graduados universitarios, en particular. Frente a un
patrn de carrera profesional-vital estndar -caracterizado por la permanecia en las
organizaciones y la ocupacin-, los patrones actuales muestran una gran diversidad. Son
muchas las personas adultas que, independientemente de la edad o de la situacin, buscan un
cambio de trabajo e incluso una reorientacin profesional (Riverin-Simard, 2000; Goodman,
Schlossberg y Anderson, 2006; Rodrguez, lvarez, Figuera y Rodrguez, 2008; y Savickas,
2009).
Esta poca de cambios en la educacin superior, y en las carreras profesionales de los
universitarios, ha conducido a un incremento cuantitativo del alumnado de mster y a un
978-84-695-8363-0
676
aumento de su diversidad: desde aquellos que alargan su formacin inicial de grado, en busca
de una mayor especializacin, hasta profesionales que vuelven a las aulas con objetivos
diversos (como reciclarse, mejorar las condiciones laborales y promocionarse o facilitar un
cambio profesional).
En este contexto cobra sentido el desarrollo de investigaciones que permitan
comprender cmo es el perfil de los estudiantes que acceden, cules son sus motivaciones y
expectativas y qu variables condicionan la integracin en este nivel, con la finalidad ltima
de poner a prueba la aplicabilidad de los enfoques explicativos desarrollados para las
transiciones en el grado. En esta lnea se integran los trabajos realizados por el equipo de
investigacin TRALS, de la Universidad de Barcelona. El primer estudio realizado, analiz la
influencia del contexto laboral en los procesos de transicin y en las expectativas de futuro de
los estudiantes de mster de Espaa y Brasil, pases con una situacin econmica diferente
(Figuera y otros, 2012). El objetivo de este segundo estudio ha sido profundizar en el proceso
de transicin a los estudios de mster oficial del rea de educacin. Dentro de esta
investigacin, este pster analiza la influencia del perfil de acceso del estudiante de mster en
relacin a las motivaciones y expectativas respecto a la formacin y a sus especificidades.
Mtodo
Se ha realizado un estudio descriptivo, de carcter cuantitativo a travs de un
cuestionario (versin papel y on-line). El instrumento incluy las siguientes dimensiones de
anlisis: trayectoria acadmica y laboral previa; motivos y expectativas respecto al mster e
integracin acadmica y satisfaccin con los estudios.
El cuestionario se aplic presencialmente en las aulas y se realiz un segundo pase online para incrementar la participacin de aquellos estudiantes ausentes el da de la pasacin. El
anlisis de los datos se ha ralizado con el programa estadstico SPSS (v. 18).
Han participado 146 estudiantes de 12 msteres oficiales del rea educativa de la
Universitat de Barcelona (UB) y de la Universitat Autnoma de Barcelona (UAB). El perfil
de acceso de los estudiantes que cursan msteres oficiales en el mbito de la educacin de las
universidades UB y UAB, que han participado en el estudio, son mayoritariamente mujeres
(74,7%), solteras (62,4%) y del Estado Espaol (86,1%), concretamente de Catalua (53,7%).
Resultados
El incremento de los estudiantes que acceden a mster en el rea de la educacin ha
propiciado la aparicin de tres tipologas de estudiantes con especificidades en cuanto a: (1) la
experiencia profesional previa y formacin; (2) eleccin de los estudios y sus objetivos y
expectativas a corto y largo plazo; y (3) en cuanto a sus necesidades de orientacin en el
proceso de decisin previo al acceso como en su posterior insercin profesional (expectativas
de futuro y satisfaccin acadmica).
Estas tres tipologas se diferencian y se catalogan en base a la experiencia laboral
previa: (a) estudiantes recin titulados (diplomatura y/o licenciatura) con o sin experiencia
laboral previa (n=63); (b) aquellos con trayectoria laboral previa igual o inferior a 3 aos
(profesional junior) (n=25) y, (c) aquellos con una trayectoria laboral superior a 5 aos
(snior) (n=40).
978-84-695-8363-0
677
978-84-695-8363-0
678
Entre los estudiantes que acaban de finalizar sus estudios (diplomatura o licenciatura)
antes de acceder al mster, se encontraban mayoritariamente con un contrato laboral a tiempo
parcial (48%) y/o en paro (41%). De los que se encontraban en una situacin laboral activa,
tanto con contratos a tiempo parcial como a tiempo completo, en un 60% de los casos su
trabajo no tena relacin con los estudios realizados hasta el momento. En un 70% de los
casos su situacin laboral al iniciar el mster no vara pero para el otro 30% su situacin
laboral cambia, sobre todo aquellos con contratos temporales que pasan a estar en una
situacin de desocupacin a expensas de que un mster les de mayores oportunidades
laborales.
En cuanto a la segunda tipologa se refiere, la mayora se encontraba en una situacin
laboral activa antes del inicio del mster (Tiempo parcial = 32%; Tiempo completo = 40%); 7
de cada 10 estudiantes desarrollaban tareas relacionadas con su formacin en sus respectivos
puestos de trabajo. Un 46% de esta segunda tipologa vio modificada su situacin laboral en
el momento de responder al cuestionario (mes de mayo); un 65% pas de activo a parado.
Finalmente, para la ltima tipologa de estudiantes vemos como la ocupacin,
sobretodo a tiempo completo es mayor que en el resto (58%), los que trabajan a tiempo
parcial representan el 22% y los que estn en paro el 20% (son el grupo con menor situacin
de desocupacin de los tres que analizamos). En ms de un 80% de los casos la ocupacin de
estos estudiantes tiene o tena que ver con la formacin recibida; si bien su situacin, en 7 de
978-84-695-8363-0
679
978-84-695-8363-0
680
978-84-695-8363-0
681
978-84-695-8363-0
682
Resumen
Este pster presenta la estructura de la tesis La transicin del pedagogo/a de la universidad
al mundo socio-profesional contextualizada en el marco de una ayuda del Programa de
Rercerca en Docncia Universitaria (REDICE12-2080-01) titulado Anlisis de las salidas
profesionales del pedagogo, desde la perspectiva de la insercin profesional y la
empleabilidad de la Universitat de Barcelona. Esta tesis tiene como finalidad proponer
programas de gestin personal de la carrera para el adulto emergente, partiendo de la
experiencia de profesionales, en este caso de la pedagoga, conociendo cmo han gestionado
sus carreras y qu competencias han sido necesarias, segn sector de actuacin, en su ptima
insercin y posterior trayectoria profesional. Con el objetivo de alcanzar este propsito en el
estudio emprico se ha optado por la complementariedad metodolgica: (1) anlisis en
profundidad de los estudios de insercin (2001, 2005, 2008 y 2011) de la Agencia de Calidad
Universitaria (AQU) y (2) entrevistas en profundidad a profesionales de la pedagoga.
Descriptores: gestin personal de la carrera, insercin socioprofesional y estudiantes
universitarios.
Abstract
This poster presents the structure of the thesis The transition from pedagogue
of the university to socio-professional world contextualized within the framework of
assistance from Programa de Rercerca en Docncia Universitaria (REDICE12-2080-01)
title Analysis of pedagogue career, from the perspective of professional integration and
employability of the University of Barcelona. This thesis aims to propose programs of
personal career management for emerging adult, based on the expertise of professionals, in
this case of pedagogy, knowing how they have managed their careers and what skills were
needed, by sector of activity, at optimum insertion and subsequent career. In order to achieve
this purpose in the empirical study has methodological complementarity chosen: (1) detailed
analysis of the insertion studies (2001, 2005, 2008 and 2011) of the University Quality
Agency (AQU) and (2) in-depth interviews pedagogues.
Keywords: personal career management, professional integration and college students.
Introduccin
Actualmente vivimos momentos en los que se reaviva el debate sobre la misin de la
Universidad; momentos en los que se demandan ajustes y revisiones de los planes de estudio
978-84-695-8363-0
683
y nuevos modelos pedaggicos que respondan a las cambiantes necesidades sociales. Con
frecuencia se le achaca a la institucin universitaria falta de adaptacin a los nuevos
requerimientos sociolaborales y, desde el mundo empresarial concretamente, se acusa a la
Universidad de ser un medio ineficaz para formar profesionales adaptados a estas nuevas
necesidades (Cajide, 2004).
Persiste una sensacin de alejamiento entre la Universidad y las exigencias sociales,
extensible a todas las disciplinas y en especial a las ciencias sociales. Se ha generado un
dualismo contraproducente, al establecerse una diferenciacin entre propedutica y
profesionalidad. Dicho dualismo se ha extendido ms all de las instituciones universitarias y
se da por vlida la consideracin, despectiva en muchos casos, de que la formacin
universitaria es excesivamente terica y alejada de la posterior actividad profesional.
El Espacio Europeo de Educacin Superior (EEES) es el nuevo mbito general en el
que se enmarca nuestra titulacin (Grado de Pedagoga), y nos ha permitido la oportunidad de
repensar la Pedagoga (Jornadas sobre el futuro grado de Pedagoga, junio de 2006), desde
la perspectiva de una justificacin epistemolgica, histrica, social, cultural y acadmica, al
disear e implementar el nuevo ttulo de grado (ANECA, 2004). El proceso de convergencia
conlleva transformar los procesos organizativos y pedaggicos de la universidad y, tal como
seala Masjuan (2008), destacar las propuestas de mejora de la calidad docente, el
acercamiento al mercado laboral y el desarrollo de competencias para la empleabilidad en el
contexto europeo.
El nuevo contexto supone un serio reto, dado que nos enfrentamos a un modelo
formativo basado en competencias que deberemos analizar en profundidad desde las
perspectivas de la formacin y la profesin. Entre otras acciones, el libro publicado por la
OCDE (2012) est diseado para ayudar a los pases a desarrollar mejoras en las polticas de
capacitacin, a travs de habilidades estratgicas, convirtindolos en puestos de trabajo,
crecimiento y mejora en sus condiciones de vida. La finalidad es contribuir al desarrollo de
los estudiantes, mejorar su insercin laboral y contribuir al crecimiento de los pases.
En el caso concreto de Pedagoga, el hecho de no tener unas salidas profesionales
perfectamente delimitadas provoca que, histricamente, nos veamos obligados a realizar
continuos esfuerzos por justificar aqullas, y por extensin la razn de ser de la titulacin. Sin
embargo tenemos la certeza de que, independientemente de las mltiples salidas profesionales
a las que se alude en los planes de estudio, es cierto que el mercado de trabajo cualificado es
dinmico y, en el caso de la Pedagoga, el desarrollo de este movimiento ha permitido ampliar
las propias salidas.
Nos enfrentamos a un nuevo marco de transicin al mundo laboral; ello implica retos
importantes en el sistema educativo tradicional y centra su atencin sobre qu conocimientos,
habilidades y actitudes necesita el trabajador para ejercer adecuadamente la profesin para la
cual se forma y concretamente, con el colectivo objeto de estudio, como sealan Garca y
Aguilar (2011). El conocimiento de la relacin que se establece entre el mercado laboral y la
formacin universitaria se hace imprescindible y ms si consideramos que la transicin
laboral constituye uno de los procesos vitales ms importantes en la configuracin del joven
adulto, que depende de multitud de factores y se configura a partir de trayectorias o itinerarios
laborales. La reflexin sobre los procesos de insercin laboral puede constituir un elemento
importante de anlisis para la adecuacin del binomio formacin/mercado de trabajo.
978-84-695-8363-0
684
978-84-695-8363-0
685
I FASE
OBJETIVOS ESPECFICOS
Describir el perfil profesional de la Pedagoga, as como las
funciones profesionales en cada uno de los contextos de trabajo
descritos
Analizar la calidad de la insercin en los contextos de trabajo del
pedagogo/a
Identificar los procesos de seleccin y el acceso al mercado
profesional de los pedagogos y pedagogas y diferenciarlos en
relacin a los contextos de trabajo hallados
Identificar las tipologas de estudiantes que acceden a la formacin
de Pedagoga y describir como infieren en su posterior insercin
Definir las competencias de empleabilidad relacionados con los
contextos de trabajo del pedagogo/a y las implicaciones en el diseo
de la formacin
Tabla 2
Objetivos de la II Fase de la tesis
OBJETIVO GENERAL
Comprender como han gestionado
su
desarrollo
profesional
pedagogos y pedagogas con una
trayectoria consolidada ms de
cinco aos- y de xito profesional
en mbitos concretos de actuacin
dentro de los propios contextos de
trabajo
II FASE
OBJETIVOS ESPECFICOS
Conocer los factores personales y contextuales relacionados y/o
asociados que influyen en el desarrollo profesional dentro de los
contextos de trabajo del pedagogo/a
Averiguar que tipo de carrera han desarrollado y que significado y
sentido le han dado
Identificar las competencias de la gestin personal de la carrera
que han puesto en marcha y las estrategias seguidas para el
desarrollo profesional
Conocer como han desarrollado los objetivos y que exploracin
han hecho de la carrera
Analizar como han intervenido los aspectos personales y
emocionales a lo largo de la gestin de la carrera
978-84-695-8363-0
686
2.- Finalidad
La finalidad de la tesis es conocer y comprender el proceso de gestin de la carrera de
los profesionales del campo de la pedagoga y los factores relacionados con su xito
profesional, contribuyendo en el grado de Pedagoga a las recomendaciones pertinentes para
un ptimo diseo de programa de gestin personal de la carrera.
Resultados
La metodologa de investigacin ser de carcter descriptivo y comprensivo. Se
utilizaran estrategias de recogida de informacin cuantitativas y cualitativas que ayudaran, en
primer lugar, a una contextualizacin de las salidas profesionales del pedagogo/a en Catalua
mediante las encuestas de insercin de la AQU y en un segundo lugar a una mejor
comprensin de las mismas a partir de la realizacin de entrevistas en profundidad a
profesionales de diferentes mbitos dentro de los contextos de trabajo hayados.
Esta primera fase, que se describe a continuacin, es de carcter descriptivo. Se parte de
los datos obtenidos en las diversas encuestas realizadas a los egresados universitarios de
Catalua por parte de la AQU a lo largo de una dcada. En la tabla 1 se presenta la
distribucin del total de la muestra de licenciados en Pedagoga encuestados telefnicamente
al cabo de tres aos de haber finalizado su formacin universitaria.
La poblacin de referencia ha sido de 94.584 personas graduadas y la muestra escogida
49.661, cifra que representa un porcentaje del 52,50%. En el caso de los estudiantes de
pedagoga sujetos objeto de estudio- la poblacin de referencias es de 1.118 y la muestra
seleccionada 666, cifra que representa un porcentaje del 59,6%.
Tabla 3
Distribucin de la poblacin y muestra de egresados de Catalua (Fuente: Estudios de insercin
AQU)
Poblacin
Muestra
(% de participacin)
Error muestral
Poblacin Pedagoga
Muestra
(% de participacin)
Error muestral
Promocin 1998
21.178
9.765
(46,1%)
0,73%
254
147
(57,9%)
5,26%
Promocin 2001
21.767
11.456
(52,6%)
0,6%
269
171
(63,6%)
4,53%
Promocin 2004
23.023
12.258
(53,2%)
0,61%
295
171
(58%)
4,87%
Promocin 2007
28.616
16.182
(56,5%)
0,52%
300
177
(59%)
5%
978-84-695-8363-0
687
Tabla 4
Dimensiones de la encuesta de egresados de Catalua por estudios de la AQU
DIMENSIONES
INDICADORES
Trayectoria
Laboral
Situacin laboral
Estabilidad en el trabajo
mbito de trabajo
Duracin del contrato
Tipo de trabajo
Ganancias anuales
Va insercin
Tiempo de acceso
Tipologa estudiantes
Adecuacin de las tareas a
la titulacin
Satisfaccin con la carrera
cursada y el trabajo
Continuacin de los
estudios
Movilidad
Contenido del trabajo
Perspectivas de mejora
Nivel de retribucin
Utilidad de los
conocimientos
universitarios
Trabajo en general
Campo de trabajo
Condiciones
Laborales
Funcionamiento
Procesos de
Seleccin
Competencias
Profesionales y
Transversales
Desarrollo
Profesional
Satisfaccin
mbito de
Trabajo
Contexto de
Trabajo
ESTUDIO
2001
9
ESTUDIO
2005
9
ESTUDIO
2008
9
ESTUDIO
2011
9
978-84-695-8363-0
688
978-84-695-8363-0
689
978-84-695-8363-0
690
Resumen
El objetivo general de este estudio es describir la productividad en Tesis Doctorales
defendidas y pendientes de realizacin sobre orientacin en Espaa, analizando sus
caractersticas acadmicas e institucionales. Para alcanzarlo se ha realizado (a) un anlisis
de las Tesis Doctorales en orientacin defendidas entre 2001 y 2012 en TESEO, (b) envo de
cuestionario online a los doctorandos que estn desarrollando su Tesis Doctoral en
orientacin mediante la Red Interuniversitaria de Profesorado de Orientacin, y (c) anlisis
de las caractersticas acadmicas e institucionales de las Tesis Doctorales registradas. Se
han obtenido noventa Tesis Doctorales defendidas en orientacin en los ltimos diez aos y
diecisis previstas de lectura entre 2014 y 2015. Estas investigaciones se han centrado en el
estudio de aspectos sobre el currculum y el desarrollo vocacional en la ltima dcada as
como en la actualidad, aunque ha aumentado la tendencia al estudio de la atencin a la
diversidad.
Descriptores: Tesis doctoral, Orientacin, Investigacin educativa.
Abstract
The objective of this study is to describe the productivity in PhD Thesis in guidance that have
been defended. To reach this objective, it has been realized (a) an analysis of the PhD Thesis
in guidance registered on TESEO database from 2001 to 2012, (b) an online questionnaire
that has been sent to PhD candidates in guidance through Interuniversity Network of
Guidance professorship, and (c) an analysis of the academic and institutional characteristics
of these PhD Thesis. It has been obtained ninety PhD Thesis in relation to the field of
guidance over the last ten years and sixteen PhD Thesis planned to defend in 2014 and 2015.
These studies have focused on the curriculum and career development in the last decade and
nowadays, and the trend has been increased in the study of attention to diversity.
Keywords: Doctoral Thesis, Guidance, Educational research.
Introduccin
La evolucin del trmino Orientacin se ha caracterizado por la confusin en su
definicin, sus principios y sus funciones. El concepto Orientacin surge con la denominacin
vocational guidance (orientacin profesional, actualmente tambin orientacin para el
desarrollo de la carrera) aunque la mayora de autores diferencian dentro de este concepto la
978-84-695-8363-0
691
orientacin acadmica puesto que tiene entidad propia como orientacin para el desarrollo de
la etapa acadmica como en la preparacin previa al desempeo profesional. Otros trminos
que han surgido relacionados con el campo de la orientacin son guidance y counseling.
Santana Vega (2009) delimita estos conceptos mediante una revisin de definiciones
aportadas por diversos autores indicando que ambos son procesos de ayuda y apoyo y
diferenciando que guidance se caracteriza por el uso de procedimientos educativos e
interpretativos, de naturaleza sistemtico y profesional, y counseling por el uso de la
comunicacin personal y su naturaleza directa e interpersonal.
Partiendo de esta base, la Orientacin hoy da se contempla como un proceso
permanente que empieza en nuestra infancia, sigue en las transiciones hacia la vida adulta y
laboral y finaliza en nuestra vejez (Rodrguez Moreno, 2002). Orientar a lo largo de la vida
conlleva tener en cuenta la variabilidad de identidades y contextos en los que se mueve la
persona para cubrir las necesidades del sujeto en cada uno de los contextos en los que se
desenvuelve (Donoso-Vzquez y Snchez Mart, 2013).
Si atendemos a definiciones arrojadas por Isus Barado (en Echeverra Samanes, Isus
Barado, Martnez Clares y Sarasola Ituarte, 2008) y Rodrguez Moreno (2002) una de las
caractersticas de la orientacin, en las que ambas autoras coinciden, es su componente
anticipador que ayuda a prever los cambios antes de que se manifieste la necesidad, dotando a
la persona de competencias bsicas para resolver una situacin antes de que sta aparezca.
Este planteamiento aqu descrito coincide con la definicin que facilita Bisquerra Alzina
(2006a, p. 10) en relacin al proceso de Orientacin:
Proceso de ayuda y acompaamiento continuo a todas las personas, en todos sus
aspectos, con objeto de potenciar la prevencin y el desarrollo humano a lo largo de
toda la vida. Esta ayuda se realiza mediante una intervencin profesionalizada,
basada en principios cientficos y filosficos.
Siguiendo a este mismo autor, Bisquerra Alzina (2006b), la Orientacin comprende las
siguientes reas:
Orientacin para el desarrollo de la carrera (orientacin profesional)
Orientacin en los procesos de enseanza-aprendizaje
Atencin a la diversidad
Orientacin para la prevencin y el desarrollo
En este estudio, partiremos de las cuatro reas que propone Bisquerra Alzina para
categorizar las temticas de Tesis Doctorales, tanto las ya realizadas y defendidas como las
que se encuentran en proceso de elaboracin. El objetivo general de este estudio es describir
la productividad en Tesis Doctorales defendidas y pendientes de realizacin sobre orientacin
en Espaa, analizando sus caractersticas acadmicas e institucionales.
Mtodo
Para la consecucin del objetivo de este estudio se han realizado las siguientes fases:
978-84-695-8363-0
692
Lpez, D. (Coord.), Pol, C. (Coord.), Delgado, M., Ferreira, C., Franchy, R., Llanes, J. y Pascual, L.
(2013). Jvenes investigadores en proceso de formacin: temticas, enfoques y perspectivas de desarrollo. IV
Seminario de la Red Interuniversitaria de Profesorado de Orientacin. Universidad de La Laguna. Tenerife.
978-84-695-8363-0
693
Figura 1. Trabajos analizados por rea de orientacin estudiada: Tesis Doctorales del 2001-02 al
2011-12 y en desarrollo
978-84-695-8363-0
694
Figura 2
Trabajos analizados por ao y evolucin de la produccin cientfica de Tesis Doctorales sobre
orientacin: 2001-02 a 2011-12 y ao previsto de lectura
Tesis Doctorales en
desarrollo
N
%
3
19%
1
6%
3
19%
3
19%
2
13%
0
0%
0
0%
0
0%
2
13%
2
13%
0
0%
0
0%
16
100%
Total
N
21
3
4
12
15
9
4
4
11
10
1
4
98
%
21%
3%
4%
12%
15%
9%
4%
4%
11%
10%
1%
4%
100%
En cuanto a la variable gnero del autor, podemos encontrar ciertas diferencias entre
las Tesis Doctorales ya defendidas y aquellas que estn en desarrollo. Para las primeras no
existen grandes diferencias en funcin del gnero del autor (sexo femenino N=46; sexo
masculino N=36). Por otro lado, si observamos el gnero del autor de las Tesis Doctorales
que se estn desarrollando en la actualidad, s podemos observar diferencias significativas,
inclinndose la balanza a favor del sexo femenino frente al sexo masculino (sexo femenino
N=11; sexo masculino N=5).
978-84-695-8363-0
695
Tabla 2
Trabajos analizados por gnero del autor y porcentaje sobre el total.
Una comparacin entre los trabajos realizados desde 2001 a 2012 y en realizacin
Gnero del autor
Mujer
Hombre
Total
Tesis Doctorales en
desarrollo
N
%
11
69%
5
31%
16
100%
Total
N
57
41
98
%
58
42
100%
Tesis Doctorales en
desarrollo
N
%
1
6%
7
44%
8
50%
0
0%
16
100%
Total
N
28
23
17
30
98
%
29
23
17
31
100%
Discusin
Correspondindose con los orgenes de la orientacin, las reas que ms se han
estudiado y se siguen estudiando por los doctorandos y doctorandas son las reas de
orientacin profesional y orientacin para los procesos de enseanza y aprendizaje. La
ampliacin de las reas que abarca este campo cientfico ha dado paso al estudio de otros
focos de atencin de la orientacin. Este ha sido el caso de la atencin a la diversidad,
presente en el contexto actual de la organizacin de la orientacin a nivel institucional y
profesional, siendo una de las preocupaciones principales de los/as orientadores/as aunque no
tanto en la temtica estudiada en los trabajos de investigacin de los doctorados y
doctorandas. A partir de los aos 60 tambin se fue considerando otra rea de la orientacin
centrada en la prevencin y el desarrollo que incluye aspectos relacionados con la parte ms
social y personal del ser humano. Al igual que la atencin a la diversidad, es el rea donde
menos Tesis Doctorales se enmarcan. A mediados de los aos 2000 se ha observado un
incremento en la produccin de Tesis Doctorales sobre orientacin. Debido a las limitaciones
del estudio y a la muestra productora de los datos, no podemos tener un mapa real de todas las
978-84-695-8363-0
696
Tesis Doctorales que se estn realizando, aunque se prev que en el ao 2015 se hayan
defendido al menos otra docena de ellas.
Del anlisis de las principales caractersticas generales y metodolgicas del estudio se
destaca que las Comunidades Autnomas con mayor nmero de Tesis Doctorales realizadas y
en desarrollo son Andaluca y Catalua, ambas comunidades con gran tradicin y desarrollo
en la investigacin y estudio de la orientacin. Asimismo, cabe resaltar que no hay grandes
diferencias en cuanto al gnero de los estudiantes de doctorado que realizan una Tesis
Doctoral en el campo de la orientacin, aunque predominan las mujeres, hecho influido por el
porcentaje mayoritario de las mismas en estudios relacionados con la educacin y por
consiguiente en la orientacin. Por ltimo, hay que sealar que aunque se han realizado ms
Tesis Doctorales mediante una metodologa cuantitativa en el periodo estudiado, los trabajos
de investigacin en desarrollo muestran una tendencia en el uso de la metodologa mixta con
el objetivo de poder lograr un mayor entendimiento del fenmeno estudiado sin utilizar una
metodologa pura.
Tras la realizacin del presente estudio hemos comprobado que la orientacin sigue
siendo uno de los mbitos de estudio e inters por los doctorandos y doctorandas. La
importancia en el estudio de la misma viene dada por la naturaleza de ayuda a los estudiantes
en la construccin de los conocimientos, en el conocimiento de s mismo y en el proceso de
anlisis de las realidades, intentando que integren todos los factores (saberes, deseos,
intereses, competencias, valores, etc.) y los diversos procesos de desarrollo (intelectual,
social, emocional, vocacional, profesional, de la carrera, etc.) en un proyecto propio de vida
(Fernndez, 2009).
Referencias
Bisquerra Alzina, R. (2006a). Orientacin psicopedaggica y educacin emocional. Estudios
sobre Educacin, 11, 9-25.
Bisquerra Alzina, R. (2006b). Modelos de orientacin e intervencin psicopedaggica.
Bilbao: RGM.
Donoso-Vzquez, T. y Snchez Mart, A. (2013). Orientacin Educativa y Profesional.
Estudio de Casos. ISEP: Barcelona.
Echeverra Samanes, B., Isus Barado, S., Martnez Clares, M. P. y Sarasola Ituarte, L. (2008).
Orientacin Profesional. Barcelona: Editorial UOC.
Fernndez, E. (2009). La orientacin acadmico-profesional en los escenarios educativos. En
L. M. Sobrado y A. Corts (Coords.), Orientacin Profesional Nuevos escenarios y
perspectivas (pp. 203-220). Madrid: Biblioteca Nueva.
Rodrguez Moreno, M. L. (2002). Hacia una nueva orientacin universitaria. Barcelona:
Universitat de Barcelona.
Santana Vega, L. E. (2009). Orientacin educativa e intervencin psicopedaggica. Cambian
los tiempos, cambian las responsabilidades profesionales. Madrid: Pirmide.
978-84-695-8363-0
698
PARTE III
978-84-695-8363-0
700
Resumen
El objetivo es analizar las estrategias de investigacin sobre datos procedentes de la
informacin latente en Internet. Estos trabajos se distinguen de aquellos que recogen los
datos a travs de Internet, por ejemplo mediante cuestionarios, y de aquellos que utilizan
datos recogidos en Internet (datos estadsticos, por ejemplo). Analizan documentos
contenidos en Internet, extrayendo los datos a partir del anlisis de esos documentos. Esos
documentos fueron depositados en su momento en la Red ajenos al futuro uso que se hara de
ellos como objeto de investigacin. Se puede decir que se trata de un modelo de investigacin
de trazos o restos dejados por los usuarios de Internet. Se han revisado investigaciones
realizadas a partir de este corpus latente, centrndose en el objeto de la investigacin
(restringido al mbito educativo), el contexto, la metodologa y las consideraciones ticas.
Las conclusiones resaltan las posibilidades y lmites de este tipo de investigaciones.
Descriptores: Latent corpus, Internet, Muestra, Investigacin educativa.
Abstract
This study aims to analyse the use of latent information at Internet, in educational research.
Such work is distinguished from those that collect the data through Internet with
questionnaires or forms, and from those using databases at Internet. These studies analyse
documents in Internet, extracting data from them. These documents, video, photos, texts,
were some day distributed through the Web not knowing this future use as research object.
We can say that it is a research model based on trails left by Internet users. To this work we
have revised the literature with research work based on this latent corpus, addressing four
questions: What can we to investigate with these data? Which is the context where to find
these data? How to select samples? And what ethics aspects to consider? Conclusions of this
work detail possibilities and opportunities as well as the limits of this research method.
Keywords: Latent corpus, Internet, Sample, Educational research.
Introduccin
La investigacin educativa basada en datos observados y recogidos de la realidad se
ha enfrentado tradicionalmente a dos procesos que consumen tiempo y recursos: la obtencin
de los datos y el anlisis de esos datos. A mayor volumen de la muestra, ms tiempo y
recursos deban ser invertidos en esas dos etapas. Un colectivo que se vea especialmente
978-84-695-8363-0
701
perjudicado era el de los estudiantes que deban realizar sus prcticas investigadoras sobre
datos ya existentes y en una dimensin manejable. Desde hace aos el segundo problema se
ha ido solucionando gracias a la introduccin de las tecnologas de la informacin, tanto en el
manejo de datos cuantitativos como cualitativos. Lejos quedan los aos en que una parte
importante del tiempo de formacin del investigador se dedicaba a la aplicacin manual de
complejas frmulas estadsticas. Y aunque el camino por recorrer en el anlisis de la
informacin cualitativa es an largo, el anlisis de textos o registros audiovisuales se ve
facilitado mediante nuevas herramientas que, en mayor o menor medida, facilitan esta tarea.
El primer problema tambin est encontrando frmulas de solucin. Por un lado, existen
grandes bases de datos sobre las que podemos trabajar. Y por otro, da a da, Internet (la Web)
ha ido acumulando ms y ms informacin en forma de textos, imgenes, vdeos, etc. Es lo
que podramos llamar un corpus latente de contenidos, disponibles en Internet para quien
desee y posea las habilidades necesarias para extraerlo.
Ya hace ms de 10 aos, Robinson (2001) sealaba que Internet se haba convertido
en un frum de comunicacin informal, recogiendo un retrato de las convergencias y
divergencias de las personas en diversas reas de la sociedad humana. En Internet podemos
encontrar historias, blogs, redes sociales, foros, agregadores, sitios web y otras muchas
herramientas abiertas a las personas comunes. En Internet estn presentes datos no numricos
y datos no estructurados como textos, sonidos, vdeos, imgenes, y tambin existe una gran
cantidad de datos numricos que reflejan el nmero de accesos, localizaciones, frecuencias,
valoraciones rpidas, etc. Adems de los datos ya disponibles, que Robinson (2001) llama
narrativas no solicitadas, una gran cantidad de datos pueden ser producidos a travs de
cuestionarios, encuestas y pginas dinmicas.
Diversos investigadores (Birnbaum, 2004; Neri de Souza y Almeida, 2009) afirman
que es posible obtener fcilmente una muestra de gran dimensin a partir de los datos
contenidos en Internet. Esta muestra es heterognea por lo que se refiere a la edad, educacin,
raza, nacionalidad y clase social. As, a pesar de que Internet tena una tasa de penetracin
global escasa, el 15,4% segn Neri de Souza (2010), su rpido crecimiento garantiza la
relevancia y representatividad en todas las sociedades y niveles sociales. Como dice
Birnbaum (2004), Internet es un medio conveniente para la investigacin internacional o
intercultural.
El concepto de crowdforcasting est cada vez ms difundido y tiene su base en la
investigacin en plataformas como Twitter o Facebook o Google+ (crowdsourcing). Con esta
tcnica es posible estudiar el comportamiento de millones de usuarios de estos medios de
interaccin social (Barbosa y OReilly, 2011). El anlisis de estos datos (datamining) se ha
convertido en objeto de trabajo para diversas empresas de prospeccin de mercado y previsin
de comportamiento de los consumidores. La investigacin educativa no ha entendido todava
completamente la riqueza de informacin y el desafo que supone este contexto. Necesitamos
de mejores modelos, tcnicas y una reflexin metodolgica que construya una epistemologa
de la investigacin sobre datos contenidos en Internet. Por ejemplo, no est claro bajo qu
condiciones las encuestas en Internet pueden ser efectivas, qu factores pueden influir en su
validez, cmo la implementacin de algunas tcnicas puede mejorar la ratio de respuestas y la
calidad de los datos, y cmo reaccionan los entrevistados a las entrevistas en lnea (Zhang,
1999).
En este texto realizaremos una aproximacin a los temas planteados, dentro de una
perspectiva amplia referida al campo de las Ciencias Humanas y Sociales, aunque con
978-84-695-8363-0
702
978-84-695-8363-0
703
datos. Lo que nos interesa aqu es sealar que podemos analizar no slo qu lengua utilizan
sino el nivel de vocabulario empleado, la construccin sintctica, y otros elementos de la
redaccin de los mensajes. Otro ejemplo, esta vez real, al que haremos referencia ms
adelante es la imagen que tienen de s mismas las adolescentes espaolas a partir del anlisis
de las imgenes contenidas en fotologs.
El segundo ejemplo nos muestra que no estamos hablando nicamente de
investigaciones de carcter cuantitativo. Imgenes y vdeos resultantes de innumerables
interacciones sociales en el mundo virtual nos permitirn recoger datos para nuestros estudios.
Algunos investigadores (Battelle, 2005; Neri de Souza, 2010) coinciden en afirmar que en el
interior de las bases de datos de Google encontramos un potencial campo de investigacin
para miles de tesis doctorales en Antropologa Cultural, Psicologa, Historia, Sociologa,
Economa o Educacin, entre otros.
Contexto de los datos en Internet
En funcin del tipo de estudio
Podemos considerar que los estudios sobre el corpus latente en Internet puede consistir
bsicamente en estudios sobre el contenido y estudios sobre la interaccin. Los estudios sobre
el contenido son aquellos que buscan datos en los documentos localizados en pginas y sitios
web pblicos en Internet. Son ejemplos de fuentes de datos los repositorios de documentos
textuales, vdeos o msica, peridicos, sitios web institucionales, pginas home personales,
blogs, wikis, etc. Los estudios sobre la interaccin son aquellos que recogen los datos a partir
de las interacciones de los usuarios a travs de esos sitios web. Son ejemplos de fuentes de
datos los foros, los mensajes en las redes sociales, los comentarios en blogs y en servicios de
noticias, los mensajes de correo y las listas de distribucin, etc.
Estos estudios sobre la interaccin tienen una larga historia en Internet. En el mbito
educativo son numerosas las investigaciones sobre la actividad en los foros (Silverman, 1995;
Alavi y Leidner, 2001; Beldarrain, 2006). Un objeto caracterstico de estudio dentro de la
educacin y el uso de TICs ha sido el trabajo colaborativo en cursos y programas formativos.
Actualmente ha cobrado importancia el anlisis de redes (Hiltz, 2005), habindose convertido
en un campo prometedor y sugerente cara a la evaluacin de los procesos de aprendizaje,
desde una perspectiva conectivista (Siemens, 2008). Los anlisis de la interaccin en las redes
tambin se estn utilizando como herramienta de evaluacin, como ya se hizo en su momento
con los foros. En este trabajo no consideramos los estudios sobre la interaccin, centrndonos
en los estudios sobre el contenido. En sentido estricto tambin tendramos que considerar la
bsqueda de informacin a partir de bases de datos en la red. Pero este tema no es el objeto de
nuestro estudio. Las bases de datos presentan caractersticas propias por cuanto son
repositorios cerrados y estructurados, es decir, de poblacin conocida y con sistemas de
seleccin de datos propios y definidos.
En funcin del carcter del sitio
Dentro de los sitios y pginas web con contenido a analizar podemos realizar otra
distincin importante entre las noticias (news oriented) y los documentos (content oriented).
En el primer caso encontramos todos los sitios de diarios, sitios institucionales, sitios con
noticias en la primera pgina, y, notablemente, todos los blogs. En el segundo caso todos los
documentos, archivos de documentos y, en particular, los sitios wiki.
978-84-695-8363-0
704
978-84-695-8363-0
705
978-84-695-8363-0
706
la Web hace imposible escoger datos a partir de toda la Web. Es decir, siempre escogeremos
muestras a partir de un subconjunto de datos, es decir, de una subpoblacin. El caso ms
notorio es la divisin idiomtica: generalmente nuestras bsquedas, se limitarn a uno o
varios idiomas. As pues, deberamos hablar de la Web de habla inglesa, etc. Para la
seleccin de los datos requerimos los servicios de un indexador, por ejemplo, un buscador
como Google. Esta es otra fuente de reduccin poblacional, ya que automticamente nos
estamos limitando a las pginas sobre las que trabaja el buscador.
Nuestro estudio raramente pretender indagar sobre todos los documentos contenidos
en la Web. En general buscaremos documentos con algunas caractersticas como, por
ejemplo, pginas web que tratan el tema de la violencia domstica. De nuevo aqu, el
proceso pasa por generar o definir una subpoblacin de la que luego extraer la muestra a
estudiar. En este proceso introducimos varias fuentes de error como las generadas por los
universos lingsticos, la distincin en pginas y sitios web, la redundancia informativa en la
Web, la limitacin a los contenidos en abierto, etc.
Consideraciones ticas
Las cuestiones ticas relacionadas con la recogida y utilizacin de datos obtenidos en
Internet son objeto hoy de gran preocupacin (Bassett y ORiordan, 2002). Robinson (2001)
propone un modelo que describe el proceso para decidir cuando los datos son directamente
publicables o necesitan de una autorizacin. Adems de la autorizacin de las personas
afectadas por los datos, debemos considerar la posible autorizacin de quien coloc esos datos
en Internet. De alguna manera nos estamos beneficiando de su trabajo y esto puede ser
resultado de una actitud generosa y activa del productor de los datos o, simplemente, puede
ser fruto de nuestra habilidad para encontrar los datos.
A pesar de la escasez de trabajos especficamente sobre la tica en el uso de datos del
cuerpo latente en Internet, podemos encontrar algunas propuestas como las de Nosek, Banaji,
y Greenwald (2002). Estos investigadores sealan las posibles consecuencias de ausencia de
un investigador durante la creacin de los datos, la publicidad de datos confidenciales o
referidos a la identidad de los autores, la seguridad del almacenamiento, transmisin o
monitorizacin de esos datos.
Conclusiones
Como conclusin de este estudio podemos sealar las enormes potencialidades para la
investigacin sobre temas educativos y sociales que ofrecen los contenidos latentes, tanto por
lo que se refiere a contenidos de difcil acceso como a amplitud de muestras. Tambin las
posibilidades para la formacin de investigadores noveles que ven la posibilidad de realizar
estudios sobre muestras difciles de generar a partir de observaciones directas por sus
limitaciones de medios. Por otro lado hemos visto las precauciones que imponen esta
metodologa en relacin a la validez y a la fiabilidad de la muestra. Y hemos hecho mencin a
una todava incipiente reflexin sobre los aspectos ticos, en muchos casos condicionados por
los cambios sociales generados desde Internet en relacin a aspectos como privacidad,
transparencia y ubiquidad. Quizs un aspecto que merece recogerse aqu es la posibilidad de
generar procesos hbridos (datos latentes en Internet y datos recogidos en muestras
observadas).
978-84-695-8363-0
707
Referencias
Alavi, M., y Leidner, D. E. (2001). Research commentary: Technology-mediated-learning. A
call for greater depth and breadth of research. Information Systems Research, 12(1), 110.
Barbosa, P., y O'reilly, A. S. (2011). Harvard Trends: Tendncias de Gesto (1 ed.). Porto:
Vida Econmica.
Battelle, J. (2005). The search: Como o Google mudou as regras do negcio e revolucionou a
cultura (1 ed.). Lisboa: Casa das Letras.
Beldarrain, Y. (2006). Distance education trends: Integrating new technologies to foster
student interaction and collaboration. Distance Education, 27(2), 139-153.
Birnbaum, M. H. (2004). Human research and data collection via the Internet. Annu. Rev.
Psychol., 55, 803-832. doi: 10.1146/annurev.psych.55.090902.141601
Eeaster, M. (2011). The prices are right: Economists find a faster, cheaper way to measure
inflation. Scientific American, 305(4), 13.
Giles, J. (2005). Internet encyclopaedias go head to head. Nature, 438(7070), 900-901. doi:
10.1038/438900a
Greenmeier, L. (2007). Wikipedia "Good Samaritans'' are on the money. Disponible en
<http://www.sciam.com/article.cfm?id=good-samaritans-are-on-the-money> Fecha de
consulta 19/10/2007.
Hiltz, S. R., y Goldman, R. (2005). Learning together online: Research on asynchronous
learning networks. Mahwah, New Jersey: Lawrence Erlbaum Associates.
Leithner, A., Maurer-Ertl, W., Glehr, M., Friesenbichler, J., Leithner, K., y Windhager, R.
(2010). Wikipedia and osteosarcoma: A trustworthy patients' information? Journal of
the American Medical Informatics Association, 17(4), 373374.
Neri de Souza, F. (2010). Internet: Florestas de dados ainda por explorar. Internet Latent
Corpus Journal, 1(1), 2-4.
Neri de Souza, F., y Almeida, P. (2009, septiembre). Investigao em Educao em Cincia
baseada em dados provenientes da Internet. Paper presented at the XIII Encontro
Nacional de Educao em Cincias. Castelo Branco.
Robinson, K.M. (2001). Unsolicited narratives from the Internet: A rich source of qualitative
data.
Qualitative
Health
Research,
11(5),
706-714.
doi:
10.1177/104973201129119398.
Siemens, G. (2008, January). Learning and knowing in networks: Changing roles for
educators and designers. Paper presented at the ITFORUM for Discussion. University
of Georgia.
978-84-695-8363-0
708
Silva, I., Martins, S., y Oliveira, T. (2010). Vdeos promocionais das Universidades no
YouTube. Internet Latent Corpus Journal, 1(1), 34-46.
Silverman, B. G. (1995). Computer Supported Collaborative Learning (CSCL). Computers &
Education, 25(3), 81-91.
Strother, J. (2002). An assessment of the effectiveness of e-learning in corporate training
programs. International Review of Research in Open and Distance Learning, 3(1), 116.
Zhang, Y. (1999). Using the Internet for survey research: A case study. Journal of the
American Society for Information Science, 51(1), 57-68.
978-84-695-8363-0
709
Resumen
La presente comunicacin analiza las implicaciones, a nivel emocional, de la metodologa
docente de la Universidad Internacional Valenciana (VIU) en los estudiantes del Grado en
Educacin Primaria. La VIU es una Universidad en la que las Tecnologas de la Informacin
y la Comunicacin (TIC) cobran un papel relevante ya que son el eje sobre el cual se
construye el proceso formativo. En este sentido, y en vistas a mejorar el proceso de
enseanza y aprendizaje, nos proponemos identificar los niveles de bienestar o malestar de
los estudiantes en relacin a las herramientas que la institucin pone a su disposicin:
videoconferencias interactivas a tiempo real; herramientas como foros, wikis y chat; videos
docentes y materiales multimedia.
Descriptores: tecnologas de la informacin y la comunicacin; Learning Management
System; emociones; e-Learning.
Abstract
This paper analyzes the implications, at an emotional level, of the teachings methodology of
the Valencian International University (VIU) in the students of Degree in Elementary
Education. The VIU is a university in which the Information Technologies and
Communication Technologies (ICTs) play an important role as they are the axis on which to
build the training process. In this sense, and in order to improve the teaching and learning
process, we aim to identify the levels of comfort and discomfort of students in relation to the
tools that the institution offers: real-time interactive videoconferencing lessons; tools such as
forums, wikis and chat, video and multimedia teaching.
Keywords: information and communications technology; learning management system;
emotions; e-Learning.
Introduccin
Las Tecnologas de la Informacin y la Comunicacin (TIC) posibilitan nuevas formas
de comunicacin e interaccin de las personas, acercndolas a travs de diferentes recursos y
herramientas. Estas prcticas, cada vez ms habituales en nuestra sociedad, tienen un
978-84-695-8363-0
710
978-84-695-8363-0
711
Distinguir las emociones que presentan una mayor frecuencia, ya sean stas positivas
o negativas.
La muestra que compone el estudio ha sido extrada del total de los estudiantes del
Grado en Educacin Primaria y que iniciaron sus estudios en el curso acadmico 2011-2012.
Est formada por 23 estudiantes con edades comprendidas entre los 20 y 50 aos: 21,74%
tiene entre 20-30 aos; el 52,17% entre 30-40 y el 36,09% entre 40 y 50. La mayora
(78,26%) son mujeres.
Definido el problema que nos ocupa y los objetivos de la investigacin, hemos
resuelto agrupar las emociones objeto de estudio en positivas y negativas con el propsito de
acotar su extensin y la interpretacin de las mismas por parte de los participantes:
a) Emociones positivas
- Orientacin: expresiones de gua, apoyo y sostn en el aprendizaje. Ayuda en la
comprensin del entorno, en las tareas y en general, en todo el proceso de
aprendizaje.
- Gratitud: expresiones de agradecimiento y alivio por la ayuda recibida,
reconocimiento.
- Tranquilidad: expresiones de confianza, acompaamiento y seguridad. Estado de
calma y despreocupacin dndose el tiempo que necesita para hacer las cosas sin
precipitacin.
- Reconocimiento: expresiones de recompensa, premio y valoracin de las acciones,
tanto propias como ajenas.
- Entusiasmo: expresiones de alegra y optimismo en relacin con las tareas de
aprendizaje. Exaltacin y excitacin del nimo por algo que causa inters,
admiracin o placer.
- Satisfaccin: expresiones de orgullo y competencia en relacin a las tareas de
aprendizaje.
978-84-695-8363-0
712
b) Emociones negativas
- Preocupacin: expresiones de tensin, inquietud, susto o miedo en relacin al
aprendizaje.
- Confusin: expresiones de desconcierto, sorpresa, desorientacin en relacin al
aprendizaje.
- Inseguridad: expresiones de duda, incertidumbre y desconfianza.
El mtodo de recogida de informacin es un cuestionario elaborado expresamente para
esta investigacin a partir de las emociones descritas y las herramientas para la docencia de la
VIU. Se trata de un cuestionario compuesto por tems de tipo Likert y estructurados en cuatro
apartados: el primero recoge los datos personales; el segundo las emociones y la frecuencia
(nunca, algunas veces, muchas veces y siempre) en las que stas han estado presentes en el
proceso de aprendizaje; la tercera parte relaciona las emociones descritas anteriormente con
los recursos didcticos y herramientas docentes de la VIU (videoconferencia; foro; chat;
documento multimedia; videos docentes; material audiovisual adicional; correo electrnico; la
red y otros recursos en lnea; el manual de la asignatura) y la cuarta y ltima recoge una serie
de valoraciones sobre el aprendizaje online a evaluar en una escala de 1 a 5 (donde 1 es el
valor ms bajo y 5 el ms alto):
-
Me resulta ms sencillo entender los sentimientos de los dems que expresar los mos
a travs de la enseanza online (tem 5).
Me resulta ms sencillo expresar los sentimientos mis sentimientos que entender los de
los dems a travs de la enseanza online (tem 6).
978-84-695-8363-0
713
Resultados
Frecuencia de emociones experimentadas
Existe una mayor presencia de emociones positivas en los estudiantes del grado ver
grfico 1 en pgina siguiente:
-
Cuatro son las emociones que ms experimentan los alumnos en relacin a los
recursos metodolgicos ver grfico 2 en pgina siguiente: orientacin, percibida
en un 29,82%; tranquilidad con un 16,59%; entusiasmo con un 12,18%; y
satisfaccin con un 11,21%.
O rie n tacin
Tranqu ilidad
S iempre
Entu siasmo
Muchas veces
Algunas veces
Nunca
Inse guridad
0
20
40
60
80
978-84-695-8363-0
Inseguridad
2,01
Reconocimiento
4,2
Preocupacin
714
4,93
Gratitud
7,84
Satisfaccin
11,21
Confusin
11,21
Entusiasmo
12,1
Tranquilidad
Porcentaje de
emocin
experimentada
16,59
Orientacin
29,82
0
10
20
30
40
978-84-695-8363-0
715
El uso de la web y sus recursos: los resultados siguen la lnea de otro material
audiovisual, obtiene puntuaciones similares (orientacin 37%; tranquilidad y
satisfaccin 20%).
Por ltimo, el manual de la asignatura logra porcentajes ms repartidos entre todas las
emociones, destaca orientacin con el 34% y tranquilidad con 24%.
Una amplia mayora de los estudiantes comparte la opinin sobre que el aprendizaje
online les ha ayudado a desarrollar sus emociones (36% muy de acuerdo y 45%
bastante de acuerdo).
Una parte importante de los alumnos afirma que les resulta ms sencillo expresar sus
emociones que entender las de los dems, algo que se confirma al comparar las
puntuaciones obtenidas con la afirmacin inversa.
A pesar de los resultados obtenidos hasta el momento, una mayora opina que a travs
de la formacin presencial expresara mejor sus sentimientos (el 36% est
completamente de acuerdo, 9% muy de acuerdo y el 27% lo est bastante). Por el
contrario un 23% est poco de acuerdo.
978-84-695-8363-0
716
Discusin
La investigacin pretende averiguar qu emociones advierten los estudiantes del
Grado en Educacin Primaria en relacin a la metodologa docente de la VIU y los recursos y
herramientas que sta utiliza para la docencia. Los resultados obtenidos sobre la frecuencia de
las emociones experimentadas apuntan una mayor presencia y variedad de emociones
positivas que de emociones negativas en este entorno de aprendizaje. Existen niveles de
bienestar emocional en los estudiantes que participaron en el estudio ya que, como podemos
extraer de los resultados, las emociones positivas obtienen puntuaciones ms altas ver
grfico 1 a destacar: gratitud (expresiones de agradecimiento y alivio por la ayuda recibida,
reconocimiento), entusiasmo (expresiones de alegra y optimismo en relacin con las tareas
de aprendizaje; exaltacin y excitacin del nimo por algo que causa inters, admiracin o
placer) y reconocimiento (expresiones de recompensa, premio y valoracin de las acciones,
tanto propias como ajenas) todas experimentadas con mayor intensidad. Estos resultados van
en la lnea de los obtenidos en otras investigaciones, como por ejemplo Rebollo et al. (2008).
En cuanto a los resultados de las emociones negativas (inseguridad, confusin y
preocupacin) resulta interesante observar cmo han obtenido puntuaciones altas en algunas
veces (73,9%; 69,6% y 52,2% respectivamente). Adems, estas tres emociones son las
nicas en las que algunos participantes del estudio afirman no haberlas experimentado nunca,
lo cual indica que las emociones negativas estn poco presentes en el proceso formativo.
Dejando a un lado los valores ms absolutos (nunca y siempre), y tomando como
referencia muchas veces podemos comprobar que se da en la mayora del resto de
emociones positivas en un porcentaje alto: 78,3% satisfaccin, 69,6% orientacin, 56,5%
gratitud y 47,8% en entusiasmo y reconocimiento. Por lo tanto, y teniendo en cuenta las bajas
puntuaciones en emociones negativas, estamos en situacin de sealar que existe bienestar
emocional generalizado en los estudiantes.
Respecto a los recursos metodolgicos y herramientas empleadas para la educacin
online, observamos que a nivel general todas aumentan la frecuencia de emociones positivas
frente a las negativas. Sin embargo, algunos de ellos producen tanto emociones de un signo
como de otro. Un ejemplo es la herramienta de videoconferencia, recurso que provoca mayor
frecuencia de emociones relacionadas con la orientacin y confusin. En este sentido
opinamos que es de vital importancia el uso de los recursos de manera eficaz para el logro de
resultados positivos, aumentando la experimentacin de emociones positivas y reduciendo las
negativas. Las herramientas en las que los alumnos han experimentado ms emociones de
cualquier tipo son el chat, la videoconferencia y el correo. La razn podemos encontrarla en
que las dos primeras son sncronas y que la tercera, an siendo asncrona, es un medio de
comunicacin habitual. Entendemos que en los tres casos la inmediatez sumada al hecho de
necesitar interactuar con otras personas en su uso puede ser un factor explicatorio de este
resultado.
Foro es la herramienta que ha obtenido emociones negativas ms presentes,
probablemente por ser un espacio donde los alumnos suelen exponer sus dudas al resto de
compaeros y al tutor, de hecho orientacin y confusin son las emociones ms
experimentadas en relacin a dicha herramienta. Comparando la herramienta de chat y foro
podemos observar como la primera obtiene puntuaciones altas en emociones positivas a
diferencia de la segunda. Parece ser que a pesar de ser ambas un medio de comunicacin
habitual entre los estudiantes, el hecho de que chat sea una herramienta sncrona es un factor
importante para la obtencin de bienestar emocional.
978-84-695-8363-0
717
978-84-695-8363-0
718
Resumen
El presente trabajo se articula en torno a tres ejes de accin: El uso de las tecnologas de la
informacin y la comunicacin, concretamente las Tablets. Las dificultades de aprendizaje
que presentan ciertos estudiantes, derivados de las necesidades especficas de apoyo
educativo que presentan. Y, finalmente, a la metodologa para trabajar las Tablets con estos
alumnos en sus aulas de referencia. El propsito de esta investigacin es mostrar cmo a
travs del uso de las tablets se puede mejorar los aprendizajes y el autoconcepto de los
alumnos que presentan alguna necesidad educativa especial.En este estudio, se utiliz una
muestra de 26 estudiantes con edades comprendidas entre 6 y 12 aos, que acuden al aula de
apoyo a tiempo parcial. La experiencia se apoyaba en el uso de aplicaciones para Tablets y
se trabajaban aspectos relacionados con las matemticas y la lectoescritura s travs de
estrategias de aprendizaje colaborativo.
Descriptores: tecnologas de la informacin y la comunicacin; tablets; metodologa:
necesidades especficas de apoyo educativo.
Abstract
This work is organized around three action axes: The use of Information and Communication
Technology (ICT), like Tablets. The learning difficulties that have several student. And finally,
the methodology to work using tablets with another student.
This investigation propose is to show how the use of tablet can help to improve in special
education student its learning and self-confidence. In this study, we use a sample of 26
students with ages between 6 and 12 years old. The student sometimes goes to a special
classroom. The experience leaned in the use of tablet applications for work mathematics and
reading-writing by collaborative learning.
Keywords: information and communications technology; tablet computers, collaborative
methodology.
978-84-695-8363-0
719
Introduccin
La tecnologa avanza a pasos agigantados y la educacin no debe pasar por alto el
potencial educativo de las ltimas herramientas tecnolgicas. Las tabletas digitales
aparecieron hace algunos aos en el mercado. Hoy no es raro ver como los nios y nias
utilizan en sus hogares las tabletas como elemento de ocio para colorear imgenes o jugar con
ellas. Las tabletas digitales se pueden utilizar no solamente para el entretenimiento sino que
pueden ser un soporte adecuado para desarrollar las capacidades y favorecer su desarrollo
cognitivo del alumnado (Hsieh, 2008). Dada las caractersticas de ests herramientas y los
software tan intuitivos con que cuentan y su entorno tan visual que utilizan hace de ellas un
recurso apropiado para trabajar con alumnado que presenta necesidades educativas especiales.
La integracin de las TIC en las aulas debe ir acompaada de una propuesta
pedaggica, distinta a los mtodos de enseanza tradicionales, y al unirse tecnologa y
pedagoga se cree un entorno propio para el aprendizaje (Dondlinger, 2007; Sarfo, F., & Elen,
J., 2007).
Actualmente, los paradigmas educativos estn cambiando el proceso de enseanza
aprendizaje, cada vez ms se centran en el en alumno. Ello implica el desarrollo de una
metodologa adecuada basada en la seleccin y planificacin de estrategias de aprendizaje y,
consecuentemente, la seleccin de tecnologas educativas que permitan alcanzar los objetivos
(Ridway, J., Swan, M., & Burkhardt, H., 2001).
En un estudio de Liu et al. (2011) pusieron de manifiesto que los estudiantes, con
apoyo de simulaciones por ordenador, estaban ms motivados para realizar las actividades
mediante ensayo-error, que por medio de ejemplos y estrategias de razonamiento analtico.
Este tipo de aplicaciones o juegos son los preferidos por los alumnos ya que fomentan el
verdadero aprendizaje mediante, comprensin de conceptos a travs del uso de un entorno de
visualizacin simulada, la resolucin de problemas y una retroalimentacin instantnea (Ke,
2009).
La actual normativa, LOE (2006), refuerza el principio de diversidad recogidos en
leyes anteriores, LOGSE (1990), con la introduccin de los principios como el de la inclusin
educativa para el alumnado con necesidades educativas especiales (acneae), la calidad de
educacin para todos, la equidad que garantice la igualdad de oportunidades y la flexibilidad
para adecuar la educacin a la diversidad. As, nuestras escuelas y maestros deben estar
preparados para cumplir dichos principios y saber dar la respuesta educativa adecuada a los
acneae.
Para hacer frente a los retos a que se enfrentan estos alumnos, son muchos los
investigadores que recomiendan la tecnologa por su potencia y flexibilidad (Woodward, J., &
Carnine, D., 1993). Son muchos los argumentos que justifican esta recomendacin, entre los
que destacamos; puede adaptar e individualizar enseanza para los estudiantes con
necesidades especiales (Bryant, D. P., & Bryant, B., 1998; National Council of Teachers of
Mathematics, 2000)
La interaccin con la tecnologa hace que los alumnos participen activamente en el
proceso de aprendizaje, comprensin de instrucciones, y, ello implica mejorar los resultados
de aprendizaje (Cho, V., Cheng, T. C. E., & Lai, W. M. J., 2009; Chou, C., 2003; Crowther,
M. S., Keller, C. C., & Waddoups, G. L., 2004; Hinostroza, J. E., & Mellar, H., 2001).
978-84-695-8363-0
720
978-84-695-8363-0
721
Se sienten bien
trabajando con la
Tablet
Es sencillo
10
978-84-695-8363-0
722
OBJ 4: Motivar y mejorar la autoestima con el uso de las tablets como recurso para aprender.
La mayora de los alumnos sealaron haberse divertido trabajando con la tablets.
Discusin y conclusiones
Tras analizar los resultados obtenidos, se observa que muchos de los aspectos
recogidos en el marco terico del estudio se confirman.
As, en relacin al el inters y la motivacin de los nios que han participado en el
estudio para el uso de la tablet es muy alto. En este mismo orden de cosas, los nios entre las
edades de 6 y 12 aos con necesidades educativas especiales fueron capaces de aprender a
usar la tablet como un medio para representar sus ideas y aprendizaje muy rpidamente y
adems ensear a sus compaeros en un entorno de trabajo colaborativo.
Tambin apreciamos que la cantidad de tiempo que los nios permanecan con la tablet
variaba segn la edad, con los nios ms pequeos o con una atencin ms limitada por si
caractersticas, la utilizaban durante menos tiempo. Hecho que recogieron en sus
investigaciones McBride y Austin (2001), asociando la madurez cognitiva con un mayor
compromiso con la tecnologa.
A medida que los nios adquirieron familiaridad con la tablet, se hicieron ms
autnomos, demandando menos de instrucciones y ayuda del docente.
La tablet es una herramienta viable para trabajar con alumnos con necesidades
especiales, ya que permite ajustarse a las caractersticas de cada uno de ellos. Asimismo
978-84-695-8363-0
723
fomenta el trabajo colaborativo entre alumnado con distinta edad pero mismo nivel de
competencia curricular.
Finalmente, adems de ser una herramienta que les divierte y les motiva, le permite
actuar como tutores de sus compaeros desarrollando positivamente la autoestima y
autoconcepto de los alumnos.
Referencias
Barton, C. y Collura, K. (2003). Catalyst for change. T.H.E. Journal. 31(4), 3942.
Bryant, D. P. y Bryant, B. (1998). Using assistive technology adaptations to include students
with learning disabilities in cooperative learning activities. Journal of Learning
Disabilities, 31, 4154.
Cho, V., Cheng, T. C. E. y Lai, W. M. J. (2009). The role of perceived user-interface design
in continued usage intention of self-paced e-learning tools. Computers & Education,
53, 216227.
Chou, C. (2003). Interactivity and interactive functions in web-based learning systems: A
technical framework for designers. British Journal of Educational Technology, 34,
265279.
Crowther, M. S., Keller, C. C., & Waddoups, G. L. (2004). Improving the quality and
effectiveness of computer-mediated instruction through usability evaluations. British
Journal of Educational Technology, 35, 289303.
Dondlinger, M. (2007). Technology based learning environments and student satisfaction. En
C. Crawford, D. Willis, R. Carlsen, I. Gibson, K. McFerrin, J. Price, et al. (Eds.),
Proceedings of the society for information technology and teacher education
international conference 2007 (pp. 297301), Chesapeake, VA.
Hinostroza, J. E. y Mellar, H. (2001). Pedagogy embedded in educational software design:
Report of a case study. Computers & Education, 37, 2740.
Hsieh, M. C. y Lee, J. S. (2008). Marker Capacity Increasing for Kindergarten English
Learning, AR, 663666.
Ke, F. (2009). A qualitative meta-analysis of computer games as learning tools. En R. E.
Ferdig (Ed.), Handbook of research on effective electronic gaming in education (pp.
132). Hershey, PA: Information Science Reference.
Ley Orgnica, 3 de octubre de 1990, General del Sistema Educativo (LOGSE).
Ley de Orgnica de Educacin de 3 de mayo de 2006 (LOE).
Liu, C. C., Cheng, Y. B. y Huang, C. W. (2011). The effect of simulation games on the
learning of computational problem solving. Computers & Education, 57, 3, 1907
1918.
978-84-695-8363-0
724
978-84-695-8363-0
725
Resumen
En este trabajo se describe una experiencia de realizacin de un proyecto tutorado,
concretamente un trabajo de investigacin completo, utilizando como recurso para la
informacin, comunicacin, evaluacin y retroalimentacin una web docente diseada con el
gestor de contenido Joomla complementada con su curso en Moodle. Se realiz en la
asignatura optativa de Mtodos de Investigacin Cualitativa de la Licenciatura de
Psicopedagoga de la Universidad de Cdiz. Una vez finalizado el trabajo se invit a los 24
estudiantes participantes a completar un cuestionario on-line para valorar los distintos
aspectos de la web y su aportacin al correcto desarrollo del trabajo. Los resultados nos
muestran una percepcin muy positiva de los participantes, apreciando no slo su carcter
innovador, sino su utilidad, claridad, organizacin y sus innumerables posibilidades
pedaggicas. Es de inters la introduccin de estas herramientas como recurso para la
orientacin de tareas en coherencia con una metodologa docente participativa.
Descriptores: web docente, universidad, CMS, LMS, TICs.
Abstract
This paper describes an experience of supervised project, namely a full research. We used as
a resource for information, communication, assessment and teacher feedback a website
designed with the content management Joomla complemented by its course in Moodle. We
performed elective course in Qualitative Research Methods for the Degree of Psicopedagogy
at the University of Cdiz. Once the research was fishished, the 24 students invited to
complete an online form to assess the various aspects of the web and its contribution to
development of research. The results show a very positive perception of the participants,
appreciating not only their innovative, but their usefulness, clarity, organization and its many
pedagogical possibilities. Of interest is the introduction of these tools as a resource for task
orientation consistent with a participatory teaching methodology.
Keywords: Teaching web, university, CMS, LMS, ICT.
978-84-695-8363-0
726
Introduccin
Desde hace dcadas la sociedad y el conocimiento vienen siendo influidos de forma
creciente por las tecnologas. La influencia digital en la prctica educativa puede tener
diversos aspectos positivos como la creacin de nuevos contextos de aprendizaje, ms
flexibles y personalizados (Baelo y Cantn, 2010). De hecho, en la actualidad son ya muy
habituales diferentes herramientas tecnolgicas cuyo fin explcito es el de facilitar la
interaccin educativa. Probablemente las plataformas ms populares son las denominadas
LMS (Learning Management System) como Moodle (Modular Object-Oriented Dynamic
Learning Environment) o Blackboard o LAMS (Learning Activity Management System),
aunque actualmente tambin se plantean otras alternativas para la utilizacin, por ejemplo, de
herramientas webs y juegos de simulacin en la formacin estudiantil32.
No obstante, la utilizacin de las tecnologas no solo es una cuestin de hardware y
software. Debemos tener en consideracin que el estudiante que hoy accede a la universidad
procede de este contexto social especialmente marcado por las TIC (Tecnologas de la
Informacin y la Comunicacin), una generacin que satisface con las TIC su necesidad de
entretenimiento, diversin, comunicacin, informacin y, tal vez, tambin de formacin
(Garca et al., 2007).
Bajo estas premisas, planteamos la realizacin de una experiencia de aprendizaje
mediado por una web docente para desarrollar un proyecto tutorado consistente en la
realizacin de un trabajo de investigacin completo. De forma general, entendemos una web
docente como un sitio en Internet que se utiliza con la finalidad de aportar informacin,
recursos y orientaciones para facilitar actividades de enseanza y aprendizaje en una
determinada materia (Moreno, Martnez y Martn, 2004; Bueno Garca y Gil Prez, 2007).
Concretamente, nuestra web docente fue diseada para que sirviera de gua en la
realizacin de un proyecto tutorado, una metodologa que, junto con el aprendizaje basado en
problemas o el anlisis de casos, se presta especialmente a su desarrollo con la mediacin de
recursos virtuales (Cabero y Romn, 2006; Coll y Monereo, 2008). Mediante la enseanza
basada en proyectos de aprendizaje tutorados se pretende promover el aprendizaje autnomo
de los estudiantes, bajo las orientaciones del docente, siendo su meta la realizacin y
evaluacin de una tarea especfica (en este caso un trabajo de investigacin) que requiera la
aplicacin de conocimientos previos, habilidades de documentacin y el manejo de conflictos
en contextos profesionales (Gil Flores et al., 2004).
En nuestro caso, y forma complementaria a la web, la retroalimentacin a cada tarea
que compona la investigacin era un elemento fundamental en el desarrollo de la actividad al
considerarse un elemento crucial para conseguir la autorregulacin del aprendizaje del
estudiante con el fin de conseguir la transferibilidad de las mejoras a otras actuaciones y
contextos (Rodrguez Gmez e Ibarra Siz, 2011).
32
978-84-695-8363-0
727
http://www.joomla.org/
978-84-695-8363-0
728
criterios de evaluacin, pasando por ejemplos, recursos o los enlaces para el envo de las
tareas y varios medios de comunicacin para resolver las dudas de forma personalizada.
Mtodo
Procedimiento
Los estudiantes participantes en la experiencia desarrollaron una investigacin
completa con el apoyo de la web, desde el diseo de un proyecto de temtica libre, hasta la
realizacin del informe final, su defensa oral y la posterior evaluacin del proceso completo.
El trabajo de investigacin, realizado en el primer cuatrimestre del curso 2012/2013, se poda
realizar de forma individual o bien en pequeos grupos de hasta cuatro personas. La
ponderacin de este trabajo supona el 80% de la calificacin total de la materia, completada
por el trabajo individual sobre la teora mediante cuestionarios en Moodle y preguntas en
lnea abiertas.
Una vez concluido el proceso, se invit a los estudiantes a cumplimentar de forma
voluntaria un cuestionario on-line para recoger sus percepciones y valoraciones sobre la
utilizacin de la web como principal gua para la realizacin de sus trabajos.
Participantes
La web docente se utiliz en la asignatura optativa de Mtodos de Investigacin
Cualitativa, perteneciente a la Licenciatura de Psicopedagoga de la Universidad de Cdiz.
Los estudiantes participantes fueron 24 que realizaron un total de 10 trabajos de investigacin
de forma individual (3), en parejas (2), en tros (3) o grupos de cuatro (2). El alumnado
cursaba la Licenciatura de Psicopedagoga en la modalidad semipresencial, debiendo acudir a
clases presenciales una vez cada dos semanas.
Instrumentacin
El cuestionario on-line, totalmente voluntario, estaba compuesto por un total de 8
preguntas:
1. Habas utilizado antes algo parecido a la Web del Trabajo de Investigacin en otras
asignaturas de la Universidad? [S / No]
2. Qu te ha parecido utilizar una Web de forma especfica para guiar el proceso de
realizacin del Trabajo de Investigacin? [Muy mal / Mal / Regular / Bien / Muy bien].
2.1. Razona tu eleccin
3. Valora los siguientes aspectos de la web: 3.1. Diseo [1 a 10]; 3.2. Organizacin [1 a
10]; 3.3. Claridad [1 a 10]; 3.4. Utilidad [1 a 10]; 3.5. Originalidad [1 a 10];
4. Qu aspectos POSITIVOS destacaras que posee la Web del Trabajo de Investigacin
tras su uso?
5. Qu aspectos NEGATIVOS destacaras que posee la Web del Trabajo de
Investigacin tras su uso?
978-84-695-8363-0
729
978-84-695-8363-0
730
Organizacin
Claridad
Utilidad
Originalidad
Figura 1. Media de las valoraciones de los estudiantes sobre el diseo, la organizacin, la claridad,
la utilidad y la originalidad de la web
Referencias
15
Aporta material y
ejemplos
12
Ejemplo
La organizacin de los contenidos, estn muy claros y sencillos de
buscar y encontrar los diversos aspectos
Los aspectos positivos a destacar es la ayuda en la realizacin del
trabajo de investigacin, he estado orientado en todo momento. Hemos
podido situar el trabajo, es decir, encaminarlo con un soporte como es la
web
Otro aspecto muy bueno son los ejemplos, ya que ha sido la
herramienta que ms nos ha ayudado
Respecto a los aspectos negativos reseados por los estudiantes, destaca el diseo
poco llamativo y que no existe un apartado de Novedades donde ir colocando las
actualizaciones de la web docente. Como se puede observar en la tabla 2, 12 estudiantes
(54,55%) no han considerado que tuviera ningn punto dbil.
978-84-695-8363-0
731
Tabla 2
Principales aspectos negativos de la utilizacin de la web
Aspecto
Ninguno
Diseo poco
llamativo
(colores)
No existe un
apartado de
Novedades
Referencias
12
5
Ejemplo
Sinceramente no destaco aspectos negativos de la Web.
El diseo de la Web, porque no atrae mucho, los colores son muy
montonos.
Referencias
5
Aadir notificaciones o
apartado de Novedades
Realizar envos desde la propia
web
Fomentar la participacin en
foro y chat
Incluir ms ejemplos
1
1
1
1
Ejemplo
Quizs como propuesta de mejora utilizara colores ms
llamativos en su diseo.
Quizs aadira (no se si es posible) notificaciones cuando se
aade material nuevo, para no despistarnos.
Quizs el enviar los trabajos a travs de la misma web.
Fomentar de alguna manera la participacin en el foro y
chat.
Incluir algunos ejemplos ms.
Discusin
La posibilidad de disear y administrar pginas webs en el mbito educativo puede ser
considerada una competencia docente cada vez ms relevante en el actual contexto
marcadamente tecnolgico. Los sitios webs no solo pueden ofrecer una excelente oportunidad
para crear recursos educativos, sino que puede ser un formato idneo para el perfil de los
actuales estudiantes universitarios.
La experiencia descrita se enmarca dentro de una metodologa participativa, donde se
implic a los estudiantes en su evaluacin y se siguieron los principios bsicos para la buena
evaluacin y retroalimentacin descritos por Nicol (2007). Es importante recalcar este aspecto
pues consideramos de relevancia no depositar en un recurso, sea una web o cualquier otro,
978-84-695-8363-0
732
todo el peso de la actividad formativa, debiendo recaer esta en unos principios metodolgicos
reflexionados y coherentes.
Hemos comprobado que la opinin de los estudiantes sobre la utilizacin de la web ha
sido muy positiva. Se ha destacado sobre todo la utilidad y la organizacin de la web y a
todos ellos les gustara utilizarla en sus propias clases, apreciando as la potencialidad
educativa de este recurso.
No obstante, tambin se han detectado algunos aspectos negativos a plantearse. Est
claro que un apartado con las novedades de la web es imprescindible (Bueno Garca y Gil
Prez, 2007), aunque lo que no parece que predomine es la idea de que un diseo sencillo sea
el ms adecuado para este tipo de webs. De hecho, han sido varias las referencias realizadas
explcitamente resaltando la conveniencia de un tipo de diseo ms llamativo y motivante.
En este caso, la plantilla utilizada haba sido diseada con el software WYSIWYG34
Artisteer, con un aspecto claro y simple. Sin embargo, y comprobando los resultados de las
valoraciones, el tema grfico y visual puede ser uno de los grandes retos para integrar en la
web junto con una estructura, unos contenidos y unos recursos pertinentes.
Referencias
Baelo, R. y Cantn, I. (2010). Las TIC en las Universidades de Castilla y Len. Comunicar,
35(18), 159-166.
Bueno Garca, C. y Gil Prez, J.J. (2007). Web docente: estructura y procedimientos bsicos
de gestin eficaz. Revista interuniversitaria de formacin del profesorado, 58, 37-50.
Cabero, J. y Romn, P. (Coord.) (2006). E-Actividades. Un referente bsico para la
formacin en Internet. Sevilla: Editorial MAD.
Coll, C. y Monereo, C. (Eds.) (2008). Psicologa de la Educacin Virtual. Madrid: Morata.
Garca, F., Portillo, J. et al. (2007). Nativos digitales y modelos de aprendizaje. Workshop
proceedings,
318.
318/Garcia.pdf.
http://ftp.informatik.rwth-aachen.de/Publications/CEUR-WS/Vol-
Gmez Ruiz, M.A., Gallego Noche, B., Ibarra Siz, M.S. y Rodrguez Gmez, G. (2010).
DiagWeb: Una experiencia de enseanza basada en proyectos tutorados en Educacin
Superior mediante una WebQuest alojada en Moodle. RED. Revista de Educacin a
Distancia, 24. http://www.um.es/ead/red/24/Gomez_Gallego.pdf.
Gil Flores, J., lvarez Rojo, V., Garca Jimnez, E. y Romero Rodrguez, S. (2004). La
Enseanza Universitaria. Planificacin y Desarrollo de la Docencia. Madrid: EOS
Universitaria.
34
978-84-695-8363-0
733
Moreno, R., Martnez, R. y Martn, I. (2004). Visitas a las pginas de una web docente
universitaria.
Pixel-Bit:
Revista
de
medios
y
educacin,
22.
http://www.sav.us.es/pixelbit/pixelbit/articulos/n22/n22art/art2206.htm
Nicol, D. (2007). Principles of good assessment and feedback: Theory and practice. REAP
International Online Conference on Assessment Design for Learner Responsibility, 29th31st May, 2007.
Rodrguez Gmez, G., Gil Flores, J. y Garca Jimnez, E. (1999). Metodologa de la
investigacin educativa. Archidona: Aljibe.
Rodrguez Gmez, G. e Ibarra Siz, M.S (Eds.) (2011). e-Evaluacin orientada al eAprendizaje estratgico en la Universidad. Madrid: Narcea.
978-84-695-8363-0
734
Resumen
El modelo de competencias es ya una realidad en el diseo de los actuales ttulos de grado y
posgrado. En esta investigacin se utiliza la metodologa de encuestas para analizar la
pertinencia y el grado de desarrollo de las competencias incluidas en una enseanza de
posgrado: Un mster oficial interuniversitario en educacin ambiental. Dentro del enfoque
metodolgico de encuestas se han diseado tres cuestionarios dirigidos a tres muestras:
especialistas en educacin ambiental, estudiantes actuales del mster y egresados del mismo.
El diseo del instrumento permite analizar la pertinencia y el grado de desarrollo de las
competencias as como relacionar dichos elementos con los mbitos y sectores en los que
existen mayores oportunidades de empleo. Los resultados y las conclusiones permiten
orientar sobre la conveniencia de trabajar o no determinadas competencias y ofrecer
informacin sobre los mbitos y sectores en los que existen oportunidades de empleo para los
educadores ambientales.
Descriptores: Competencias, evaluacin, posgrado, educacin ambiental, metodologa de
encuestas.
Abstract
The model of competences is already a reality in the design of the current undergraduate and
graduate degrees. This research uses survey methodology to analyze the relevance and the
degree of development of the competences included in graduate education. An interuniversity
official master in environmental education. In the methodological approach of surveys, it has
been designed three questionnaires to three samples: Environmental education specialists,
currents students and graduates of the same master. The design of the instrument allows us to
analyze the relevance and degree of development of skills and to relate these elements to the
areas and sectors where there are more job opportunities. The results and conclusions help to
guide on whether to work or not certain competences and provide information on the areas
and sectors where there are job opportunities for environmental educators.
Keywords: competences,
methodology.
evaluation,
graduate,
environmental
education,
survey
978-84-695-8363-0
735
Introduccin
El Mster en educador/a ambiental es una enseanza conjunta de posgrado en la que
participan seis universidades andaluzas. El Mster se imparte desde el curso 2009-2010
apoyado en una herramienta de teledocencia (videoconferencia). Como otras enseanzas de
grado y posgrado adaptadas al Espacio Europeo de Educacin Superior, este Mster est
diseado bajo el modelo de competencias para formar a profesionales y a investigadores de la
educacin ambiental. El uso de las competencias en educacin superior ha ido poco a poco
integrndose en las programaciones de los actuales planes de estudios, pero tras cuatro aos
de experimentacin, todava es un reto que las competencias sean el verdadero motor del
proceso de enseanza-aprendizaje. O lo que es lo mismo, con plasmar unas competencias en
un plan de estudios no se garantiza que los graduados, o posgraduados, hayan trabajado y
adquirido dichas competencias para su desempeo profesional.
Existen numerosos trabajos que intentan profundizar en este tema crucial de las
competencias en la educacin superior (AAVV, 2005; AAVV, 2008; Jornet, Perales y
Gonzlez Such, 2010; Snchez Santamara, 2011). El presente trabajo versa sobre una
investigacin llevada a cabo en la Universidad de Mlaga, con el objetivo de evaluar las
competencias que se desarrollan en el Mster Interuniversitario de Educacin Ambiental. De
este modo, se establecieron una serie de objetivos especficos relacionados con a) evaluar la
pertinencia de las competencias del Mster Interuniversitario de Educacin Ambiental; b)
conocer el grado de desarrollo de las competencias del mster tanto en los estudiantes actuales
como en los egresados; y c) determinar qu mbitos o temas son los que proporcionan
mayores oportunidades de empleos a los estudiantes y egresados del Mster.
Metodolgicamente este trabajo sigue un procedimiento clsico de comparacin de las
opiniones de los estudiantes sobre las competencias que han adquirido y las que manifiestan
poseer los egresados que han realizado esos mismos estudios. Este procedimiento ha sido
llevado con xito en otras investigaciones similares en la educacin superior (p. ej. Gmez
Barajas, 2012).
Mtodo
Para cumplir los objetivos de la investigacin se emple la metodologa de encuestas.
Se elaboraron tres cuestionarios, sobre la misma base de competencias, con el sistema de
encuestas online Limesurvey (www.limesurvey.org). Los cuestionarios mantuvieron un
esquema similar en relacin a las competencias sobre las que se quera interrogar, pero con
algunas diferencias en funcin de la muestra a la que iban dirigidos (estudiantes, egresados y
especialistas). Antes de aplicar los cuestionarios se realiz una validacin a travs de
expertos. Cinco expertos en investigacin y evaluacin educativa valoraron la adecuacin de
los tems considerados en relacin a los objetivos que tena la investigacin. Tras un estudio
de las sugerencias aportadas por los expertos se acab de dar forma a los cuestionarios finales.
El acceso a los cuestionarios se facilit a travs de correos electrnicos, que se enviaron a
cada uno de los colectivos, donde se indicaba el enlace al que deban acceder para completar
el cuestionario.
Muestra
La muestra encuestada asciende a 66 participantes (n = 66). Se utilizaron tres submuestras correspondientes a tres sectores relevantes en relacin a las competencias
978-84-695-8363-0
736
investigadas. Una muestra de estudiantes actuales del Mster n1=25 (que supone un 46.3% de
la poblacin), una muestra de egresados n2=15 (8,8% de la poblacin) y una muestra de
especialistas en Educacin Ambiental, n3=26.
Los estudiantes que han rellenado la encuesta tienen edades comprendidas entre los 21
y los 36 aos, con una media de 27,04 aos (D. T.= 4,04). El 26,1% eran hombres y el 73,9%
mujeres, de todas las provincias participantes (Almera, Cdiz, Crdoba, Granada, Mlaga y
Sevilla). De ellos el 52,2% est realizando el itinerario investigador del Mster y el 45,8% el
profesional. Un 30,4% de estos estudiantes ya ha tenido alguna experiencia laboral (entre 2 y
3 aos en promedio) relacionada con la Educacin Ambiental. Un 20,8% haba recibido algn
otro tipo de formacin en EA al margen del Mster (cursos de monitores, asociaciones,
voluntariado, diseo y el desarrollo de proyectos). Los estudiantes actuales estn
interesados sobre todo en temas como la comunicacin ambiental (45,8%), los residuos
(41,7%), el agua, el medio rural y l divulgacin cientfica (todos en un 37,5%). Los sectores
de empleo en los que estn ms interesados son la enseanza (58,3%), las ONGs,
asociaciones y fundaciones (45,8%), las entidades ciudadanas (33,3%) y el desarrollo rural
(29,2%). En sectores como la Administracin, Turismo y hostelera y Servicios a empresas,
los encuestados manifiestan un inters bajo (16,7%).
Los egresados encuestados tienen edades comprendidas entre los 23 y los 40 aos, con
una media de 28,53 aos (D. T.= 5,58). El 20% eran hombres y el 80% mujeres, de todas las
provincias participantes (Almera, Cdiz, Crdoba, Granada, Mlaga y Sevilla). El 33,3%
finaliz sus estudios en 2010, el 20% en 2011 y el 46,7% de los que han respondido la
encuesta, finalizaron el Mster en 2012. El 53,3% de los egresados realiz el itinerario
investigador del Mster y el 46,7% el profesional. Un 20% de estos egresados est ya
trabajando como educador/a ambiental (monitores-coordinadores de centros de EA y de
cursos de sensibilizacin ambiental, trabajos de investigacin y asesora ambiental a entidades
locales). Un 40% ha recibido algn otro tipo de formacin en EA al margen del Mster
(cursos de FPO u otros en medio ambiente organizados por entidades de EA, cursos en la
universidad, doctorado,). Los estudiantes actuales estn interesados sobre todo en temas
como la formacin (46,7%), comunicacin ambiental y medio rural (40%), divulgacin
cientfica, transporte y movilidad, agricultura y ganadera, residuos y agua (todos en un
33,3%). Los sectores de empleo en los que estn ms interesados son la enseanza y las
ONGs, asociaciones y fundaciones (73,3%), la investigacin (40%), el desarrollo rural y la
administracin (26,7%). En sectores como el turismo y la hostelera, entidades ciudadanas, y
medios de comunicacin (20%), y en los servicios a empresas los encuestados manifiestan un
inters bajo (13,3%).
Los especialistas encuestados trabajan en centros de educacin ambiental, para la
administracin autonmica y las universidades (el 50% trabaja en entidades pblicas y el otro
50 en privadas). Existe una representacin de especialistas de todas las provincias andaluzas.
Solo un 20,8% son dueos de sus empresas. Los asalariados se manifiestan en un 66,7%,
autnomos y cooperativistas, ambas figuras en un 16,7%. En relacin al tamao de las
entidades, tanto las microsistema (menos de 10 trabajadores) y las grandes (ms de 250),
suponen el mismo porcentaje, un 37,5%. Las pequeas empresas (menos de 50) y medianas
(entre 50 y 250 trabajadores), suponen cada una de ellas el 12,5%. Los sectores ms
representados, en los que se encuadra la actividad de los especialistas, son la enseanza
(50%), la investigacin (42,3%), la universidad (34,6%) y la administracin (30,8%). Las
ONGs, asociaciones y fundaciones, y el turismo y la hostelera, suponen ambas un 19,2%.
Otros sectores representados en la muestra son los servicios a empresas (15,4%), desarrollo
978-84-695-8363-0
737
rural y entidades ciudadanas (ambas el 7,7%). Estos especialistas cuentan para sus entidades
con el 29,2% de egresados del Mster en EA (becarios, voluntariado, educador ambiental,
investigadores,). Los temas en los que se consideran mejor preparados estos especialistas
son la formacin (84,6%), la comunicacin ambiental (42,3%), bosques (26,9%), divulgacin
cientfica (19,2%), la energa y los residuos (ambos con un 15,4%), y el agua (11,5%). Otros
temas menos representados son el medio rural y medio marino, la agricultura y la ganadera
(todos con un 7,7%) y la pesca y el trasporte (ambos con un 3,8%).
Instrumento
La encuesta aplicada a la muestra de los estudiantes constaba de tres secciones, en la
primera de ellas estaba constituida por datos socio-demogrficos, datos relacionados con el
itinerario cursado en el Mster y datos relativos a su situacin laboral. En la segunda seccin
el objetivo era conocer el dominio de las competencias que los alumnos posean antes de
comenzar el mster, as como la importancia que le atribuan a la misma. En la tercera
seccin, se peda que indicasen los temas ambientales en los que estaban ms interesados y
los sectores donde les gustara desempearse laboralmente. Por ltimo, se les ofreca la
posibilidad de realizar sugerencias.
La segunda encuesta destinada a los egresados constaba tambin de tres secciones. En
la primera se les requeran datos socio-demogrficos, datos relativos a la realizacin del
mster, as como la valoracin del mismo y datos laborales. En la segunda seccin deban
indicar el grado de adquisicin en relacin a las competencias del mster una vez finalizado, y
la importancia que le conceden a cada una de ellas. En la tercera seccin al igual que con los
estudiantes, se les peda que indicasen los temas laborales que ms le interesasen y los
sectores donde les gustara trabajar. A ellos tambin se les ofreci la posibilidad de realizar
sugerencias.
La tercera encuesta realizada por especialistas en EA constaba de dos secciones. En la
primera se les peda datos relativos a su empresa u organismo, su situacin laboral, los
sectores donde se encuentran su empresa, en qu temas relacionados con la EA se consideran
mejor preparados y si tenan contratado a personal egresado del Mster en EA. En la segunda
seccin deban valorar la importancia de las competencias que se pretenden desarrollar en
Mster de EA. Al igual que a las otras dos muestras, tambin se les ofreci la posibilidad de
realizar sugerencias.
Caractersticas psicomtricas del instrumento
En un estudio conjunto de fiabilidad (en la parte comn de las encuestas empleadas) se
obtuvo un de Cronbach de 0,92. Adems de la validacin de expertos comentada
anteriormente (validez de contenido), se realizaron diversos anlisis de componentes
principales para evaluar la validez. En primer lugar se emple el anlisis factorial de
componentes principales. Se consigui una solucin factorial de 6 componentes que
explicaban el 76,52% de la variabilidad. Tambin se realiz un anlisis factorial categorial de
componentes principales (CATPCA) que mostr una modelo de 4 factores que explicaban el
69,93% de la varianza, con un de Cronbach global de 0,98 (basado en los autovalores
totales).
978-84-695-8363-0
738
Resultados
Algunos resultados descriptivos
En relacin a la muestra de estudiantes, los resultados ms destacados corresponden a
las competencias que dicen manifestar que ya haban adquirido, o no, antes de la realizacin
del Mster.
Las competencias (de la lista total de 21) que consideraban que posean ms son
(valoradas de 1 a 5):
-
Las competencias (de la lista total de 21) que consideraban que posean menos son
(valoradas de 1 a 5):
-
978-84-695-8363-0
739
Los estudiantes egresados del Mster afirman haber adquirido todas las competencias
trabajadas en el Mster. De ellas destacan con mayor puntuacin (de 1 a 5) las siguientes:
-
Sig.
(p)
5,15
0,031
7,36
0,011
10,94
0,003
12,63
0,001
13,30
0,001
8,99
0,006
9,40
0,005
7,65
0,010
15,01
0,001
17,81
0,000
7,10
0,013
12,76
0,001
978-84-695-8363-0
740
considerando al mismo tiempo las veintiuna competencias y las tres muestras sealadas
anteriormente. En general todas las competencias fueron valoradas de una manera similar por
las diferentes muestras encuestadas. Por este motivo los anlisis comparativos no han
permitido detectar ninguna diferencia significativa. Esto es, no existen suficientes datos como
para poder afirmar que las diferentes muestras tienen diferente opinin sobre la relevancia de
las competencias. En la siguiente tabla se incluye la media de las valoraciones de la muestra
total (estudiantes + egresados + especialistas). En ella se observan qu competencias son ms
valoradas.
Tabla 2
Valoracin de relevancia de las competencias (n = 66) Competencias ms valoradas
Variable dependiente
C4: Poseer habilidades de aprendizaje que les permitan continuar
aprendiendo de un modo que habr de ser en gran medida
autodirigido y /o autnomo.
C16: Fomentar el compromiso tico y la responsabilidad con el
medio ambiente.
C8: Comprender la Educacin Ambiental desde una perspectiva
transdisciplinar como instrumento para la sostenibilidad.
C6: Ser capaz de realizar un anlisis crtico, evaluacin y sntesis de
ideas nuevas y complejas.
C7: Conocer los principales problemas ambientales, los conceptos
con ellos ligados y su perspectiva desde la Educacin Ambiental.
C3: Saber comunicar sus conclusiones (y los conocimientos y
razones ltimas que los sustentan) tanto a pblicos especializados
como no especializados, de un modo claro y sin ambigedades
C14: Conocer y manejar las principales fuentes de informacin y
sistemas de consulta.
C1: Saber aplicar los conocimientos adquiridos y su capacidad para
resolver problemas en entornos novedosos, poco conocidos, dentro
de entornos ms amplios o multidisciplinares
Intervalo de
confianza 95%
Lmite
Lmite
inferior superior
Medi
a
Error
tpico
4,28
0,13
4,01
4,55
3,87
0,19
3,47
4,27
3,88
0,18
3,51
4,26
3,93
0,15
3,62
4,24
3,88
0,16
3,56
4,20
3,87
0,15
3,56
4,19
3,70
0,18
3,33
4,07
3,80
0,10
3,59
4,01
Discusin
Los objetivos perseguidos con esta investigacin han sido cumplidos suficientemente.
Tras los resultados comentados en el apartado anterior se observa cmo las competencias que
se desarrollan en el Mster en Educador/a Ambiental han sido evaluadas por parte de los
estudiantes actuales, los egresados del Mster y por un grupo relevante de especialistas en
educacin ambiental (objetivo general). Todas las competencias han sido valoradas
positivamente, de una manera similar, por los tres colectivos considerados (objetivo
especfico a). En la Tabla 2 se destacan las competencias que se consideran ms relevantes
por los tres colectivos de manera conjunta.
Dichas competencias, que en muchos casos no se posean antes de realizar el Mster
(en concreto 12 de ellas; ver Tabla 1), se ha comprobado cmo tras la formacin recibida, los
estudiantes egresados del Mster manifiestan claramente que han progresado en ellas
(competencia especfica b).
El estudio de las muestras de egresados y de especialistas ha permitido conocer
adems qu mbitos o temas son los que proporcionan mayores oportunidades de empleo a
los egresados del Mster (competencia especfica c). De esta forma, teniendo en cuenta la
978-84-695-8363-0
741
978-84-695-8363-0
742
Resumen
El estudio sobre la distribucin del tiempo de los directores escolares y sus efectos sobre el
desempeo de sus estudiantes es una productiva lnea de investigacin educativa que ha
aportado interesantes informaciones para la mejora de la direccin escolar. El presente
estudio busca determinar la relacin entre la distribucin del tiempo de los directores de
escuelas de Primaria en Espaa y el desempeo de los estudiantes. Para ello se hace una
explotacin especial de la Evaluacin general Diagnstica de Primaria realizada en Espaa
en 2009. Los resultados indican que la mayor parte del tiempo lo dedican a actividades
administrativas Tambin que el gnero del directivo, su edad y su formacin para
desempear este cargo influyen; as como la titularidad del centro y su tamao. Por ltimo,
la investigacin ha encontrado que los estudiantes de los centros cuyos directores dedican
ms tiempo a tareas pedaggicas obtienen significativamente mejores resultados.
Descriptores: Direccin escolar, Distribucin de tiempo, Organizacin escolar, Educacin
Primaria.
Abstract
The time allocation of school principals study and their effects on the student performance is
a productive line of research that has provided interesting educational information for
improving school leadership. This study aims to determine the relationship between the time
allocation of Primary School principals in Spain and the student performance in these
schools. For that purpose, this is a special exploitation of the General Primary Diagnostic
Assessment held in Spain in 2009. The results point out that most of the time is spent on
administrative activities. Also that the principal's gender, age and training for this role
influence on the same way, and also the ownership of the centre and its size. Finally, research
has found that students in schools whose principals spend more time on educational tasks get
significantly better results.
Keywords: School Leadership, Time Allocation, School Management, Primary Education.
Introduccin
Aunque desde los aos 60 es posible encontrar trabajos que abordan el estudio de la
distribucin del tiempo de los directores escolares, es desde los aos 80 cuando se ha
978-84-695-8363-0
743
desarrollado una fructfera lnea de investigacin educativa que busca profundizar tanto en su
descripcin como en el anlisis de sus efectos sobre la dinmica del centro. Entre los estudios
ms relevantes desarrollados en la dcada de los 80 se encuentran los de Burke (1980), Hallet
(1985), Ghosey (1987), Osborne, y Wiggins (1989). En la dcada de los 90 destacan las
aportaciones de Gorman (1993) o Helps (1994); y, ya en estos primeros aos del nuevo siglo,
se encuentran trabajos como los de Larry (2003), Rayfield y Diamantes (2004), Taylor
(2007), Buttram, Mead, Loftus y Wilson (2008), Walker (2009), o Murillo y Romn (2013).
En Espaa destaca el estudio de Murillo y Barrio (1999) con datos de 437 directores de
Educacin Primaria.
Esta lnea se plante como uno de sus primeros objetivos conocer qu porcentaje de
tiempo dedican los directores y directoras de escuelas a cada tarea (Gordon, 1996; Walker,
2009). La idea que se desprende de todos ellos, independientemente del nivel o el pas, es que
se dedicaban prioritariamente a las tareas administrativas y burocrticas, y muy poco a las
relaciones pblicas y a las tareas pedaggicas.
Otro de los ejes de la investigacin sobre la distribucin de los directores e determinar
si la misma afecta al desempeo de los estudiantes. En un estudio reciente, Horng, Klasik y
Loeb (2010) encontraron que las escuelas de bajo rendimiento se diferencian en la
distribucin del tiempo de sus directores es respecto a las de alto rendimiento. As, hallaron
una relacin significativa y positiva entre el tiempo dedicado a tareas de gestin de la
organizacin tales como la contratacin de personal y la distribucin de recursos, y los
resultados de los estudiantes. La Investigacin Iberoamericana sobre Eficacia Escolar
(Murillo, 2007) descubri que existe una relacin estadsticamente significativa entre el
tiempo que dedican los directivos a tareas relacionadas con el liderazgo pedaggico y un
mayor desempeo de los estudiantes de esa escuela. Y, Murillo y Romn (2013), por ltimo,
con datos de 2.580 directivos de 16 pases de Amrica Latina y utilizando modelos multinivel
con tres niveles para el rendimiento en Matemticas y Lectura, encontraron que el porcentaje
de tiempo que los directores y directoras dedican al liderazgo pedaggico incide en el
rendimiento de los estudiantes de Sexto Grado de Primaria en Lectura y en Matemticas, as
tambin en Lectura en la muestra de estudiantes de Tercer Grado, y mayor en Matemticas
que en Lectura.
En Espaa destaca el estudio de Murillo y Barrio (1999) con datos de 437 directores
de Educacin Primaria, el cual busc determinar la distribucin del tiempo que dedican a las
diferentes tareas relacionadas con el desempeo de su funcin directiva. As como identificar
los factores relativos a las caractersticas del directivo y del centro asociados a esa
distribucin. Y, en tercer lugar, estim la relacin entre la distribucin del tiempo de los
directivos y el desempeo de los estudiantes de la escuela. En l se constata que el mayor
tiempo se invierte en tareas relativas a la administracin y organizacin de su tiempo
(36,44%), el 26,7% a tareas de liderazgo pedaggico, un 15,6% a la relacin con las madres y
padres de los estudiantes, algo menos al desarrollo personal (14,95%) y la menor cantidad de
tiempo, el 6,31%, se destina a otras tareas.
En la presente investigacin se pretende determinar la relacin entre la distribucin del
tiempo que los directores y directoras de los centros educativos de Educacin Primaria en
Espaa dedican a las diferentes tareas, y el desempeo de los estudiantes de la escuela en
Competencia Matemtica y Lingstica.
978-84-695-8363-0
744
Mtodo
Para alcanzar estos objetivos se realiz una explotacin especial de los datos de la
Evaluacin de Diagnstico General (EDG) de Educacin Primaria realizada en 2009 por el
actual Instituto Nacional de Evaluacin Educativa, del Ministerio de Educacin de Espaa
(Instituto de Educacin, 2010). Las variables utilizadas fueron de tres tipos a) Variables
explicativas: Distribucin del tiempo de trabajo de los directivos en seis tareas diferentes; b)
Variables de producto: Desempeo de los estudiantes en Competencia en Comunicacin
Lingstica y en Competencia Matemtica, y c) Variables de ajuste: ISEC de la familia del
estudiante, gnero del estudiante, preescolarizacin del estudiante, e ISEC de la escuela.
La muestra final utilizada para esta investigacin estuvo conformada por 874
directores y directoras de escuelas de Educacin Primaria y 28.708 estudiantes de 4 curso de
Educacin Primaria. Varios fueron los instrumentos utilizados por esta investigacin: en
primer lugar dos pruebas de desempeo una para cada una de las dos competencias evaluadas:
Competencia en Comunicacin Lingstica (fiabilidad de 0,861), Competencia Matemtica
(0,800). En segundo lugar, un cuestionario dirigido a estudiantes y otro a familias, y, por
ltimo, un cuestionario para directivos.
Los anlisis realizados son, en primer lugar, un anlisis de clster para encontrar
diferentes tipos de directivos en funcin de la distribucin de su tiempo, y en segundo lugar
un anlisis multinivel para estudiar su incidencia en el desempeo de los estudiantes.
Resultados
Segn la opinin de los propios directivos, el promedio de distribucin de su tiempo es
el siguiente:
1. Tareas administrativas internas: 26,66% del tiempo, con una desviacin tpica de
12,78.
2. Tareas relacionadas con el currculo y la enseanza general en el centro: 29,25%, con
una desviacin tpica de 13,58.
3. Tareas relacionadas con las peticiones de las Administraciones Local, Autonmica y
central, aras: 19,96%, con una desviacin tpica de 9,73.
4. Tareas relacionadas con las reuniones con el profesorado, las familias...: 22,21% del
tiempo, con una desviacin tpica de 10,53.
5. Otras tareas: 4,92% con 7,52 de desviacin tpica.
De esta forma, los directivos espaoles de centro de primaria, en una hipottica jornada
laboral de 8 horas en el que no tengan obligaciones lectivas, dedican 3 horas y 43 minutos a
tareas de carcter administrativo, 2 horas y 20 minutos a tareas relacionadas con el currculo,
1 hora y 46 minutos se dedica a reuniones y los 23 minutos restantes a otras actividades.
De la aplicacin del anlisis de clster se encuentran
distribucin de tiempo (Tabla 1):
978-84-695-8363-0
745
Directivo
A
22
22
22
28
Directivo
B
18
47
12
19
Directivo
C
43
24
14
16
399
243
234
Fuente: Elaboracin propia a partir de los datos de la Evaluacin General Diagnstica de Educacin Primaria de
2009 (Instituto de Evaluacin, 2010).
En las Tablas 2 y 3 se presentan los resultados del proceso de modelado multinivel para cada una de las dos
variables de producto.
Del mismo, se observa, en primer lugar, que el ndice Socio-Econmico y Cultural del
estudiante y de la escuela estn presentes en el modelo de ajuste y en el final. Ello indica que
efectivamente estn relacionados con el desempeo de los estudiantes y que cumplen
perfectamente su funcin de ajuste. En los datos analizados, y aunque no sea el objeto de
este estudio, se observa que por cada desviacin tpica que aumente el ndice Socio
Econmico y Cultural (ISEC) del alumno su rendimiento aumentar una media de 24 puntos
(segn la materia). Otras variables que son interesantes de destacar es que se ha observado
que ni el gnero ni la pre-escolarizacin estn influyendo en las variables de producto.
Pero quiz los hallazgos ms interesantes para los objetivos de este trabajo, ha sido
obtenidos tras el proceso seguido de modelamiento para cada una de las variables de
producto, tanto la competencia Lingstica como Matemtica. Si analizamos los datos
referidos al modelamiento para la competencia Lingstica observamos que los directores y
directoras que se centran en los temas curriculares inciden de manera significativa en la
competencia lingstica de los estudiantes, aumenta 4,69 puntos. Mientras que los modelos de
direccin basados en reuniones y atender los requisitos de la Administracin no hacen una
aportacin significativa (Tabla 2).
Del mismo modo, en proceso de modelamiento utilizado para la Competencia
Matemtica, tambin observamos que este mismo modelo, centrado en los temas curriculares,
su aportacin es significativa y positiva en el desempeo de los estudiantes en esta materia
978-84-695-8363-0
746
curricular, aumenta 5,14 puntos. Y de nuevo se reitera que aquellos directores y directoras
que se centran prioritariamente en tareas burocrticas, bien por dedicarse a reuniones con los
profesores y familiares, como responder a las demandas de la Administracin, y a la gestin
interna del centro no consiguen una mejora en el rendimiento en Matemticas (Tabla 3).
Tabla 2
Proceso de Modelado multinivel para Competencia Lingstica
Modelo nulo
(ee)
Parte fija
Intercepto
Modelo con
Modelo
variables de
final
ajuste
(ee)
(ee)
502,59
(1,14)
25,91 (0,65)
31,02 (2,41)
NS
4,69 (2.32)
NS
605,51
7864,81
602,62
7864,41
Tabla 3
Proceso de Modelado multinivel para Competencia Matemtica
Modelo
nulo
(ee)
Parte fija
Intercepto
ISEC de las familias
Gnero del estudiante
Preescolarizacin
ISEC-Escuela
Variables de proceso
Dir A: centrado en reuniones y requisitos de la Admon.
Dir B: centrado en te mas curriculares
Dir C: centrado en tareas de administracin interna
Parte aleatoria
Entre escuelas
Entre alumnos
500,58
(1,37)
Modelo con
Modelo
variables de
final
ajuste
(ee)
(ee)
501,77
(1,25)
23,80 (0,65)
NS
NS
27,83 (2,12)
500,92
(1,19)
23,81 (0,65)
27,83 (2,11)
NS
5,14 (2,36)
NS
1346,51
8549,74
638,16
8136,59
637,17
8136,23
Con ello se puede afirmar la importancia de la distribucin del tiempo de los directores
y directoras en el desempeo de los estudiantes de su escuela. Segn estos resultados, con una
muestra importante de directivos espaoles de escuelas de Educacin Primaria, se observa
978-84-695-8363-0
747
con claridad que aquellos que dedican ms tiempo a quehaceres relacionados con tareas
curriculares y con la enseanza del centro en general consiguen que los alumnos y alumnas
aprendan ms, son mejores directivos. Es decir, que el hecho de que directivo del centro
educativo sea del tipo B, es decir especialmente centrado en temas curriculares, tiene un
efecto positivo sobre el desempeo de los estudiantes en las dos variables de desempeo
analizadas.
Discusin
La investigacin ha encontrado evidencias para hacer mejores directores, aquellos que
consiguen que sus estudiantes aprendan, son los que ms tiempo dedican a tareas curriculares.
Este resultado coincide con el hallado por Murillo y Barrio (1999), con la misma
metodologa, y con Murillo y Romn (2013). El meta-anlisis de Robinson, Lloyd y Rowe
(2008) con estudios sobre la relacin entre el liderazgo escolar y resultados de los estudiantes,
llegaron a la misma concusin: los directores con un estilo Pedaggico tienen una incidencia
positiva sobre el rendimiento de los estudiantes. En este sentido este nuevo estudio corrobora
lo hallado utilizando la misma metodologa, y referido a la misma poblacin, los directores de
Educacin Primaria espaoles, con datos de hace ms de 10 aos. Por lo que se ve una
estabilidad en los resultados lo que aporta fortaleza a los resultados obtenidos en ambos
estudios.
Las aplicaciones prcticas de este estudio son inmediatas. Por un lado, dar el claro
mensaje a los directores y directoras acerca de que el modo en el que distribuyen su tiempo, a
pesar de no estar en el aula, incide en el rendimiento de los estudiantes. Cul es la
distribucin que mejora los aprendizajes? Sin duda, aquella que est dedicada prioritariamente
a cuestiones pedaggicas, parece una obviedad, la cual est corroborada por los datos
empricos. Por tanto, si en algo hay que delegar es en las tareas que no se relacionan con la
mejora de los procesos de enseanza y aprendizaje como son las administrativas.
Y, por otro, estas investigaciones tambin tienen su utilidad las Administraciones; los
datos son claros en demostrar que los directores y directoras que dedican demasiado tiempo a
las tareas burocrticas, tanto internas como externas sus estudiantes obtienen peores
resultados. Frecuentemente, ello es debido en gran medida a las demandas constantes de las
diferentes Administraciones. Por tanto, ayudar a los directivos a que se ocupen
prioritariamente de lo pedaggico es tambin contribuir a la mejora de la calidad de la
educacin reduciendo las exigencias sobre su gestin burocrtica.
La investigacin ha demostrado que el trabajo del director o directora incide en el
aprendizaje de los estudiantes; preocuparse en que los directivos se dediquen sus esfuerzos en
"lo importante", a las cuestiones pedaggicas, es una estrategia ms para mejorar la calidad de
la educacin. Si queremos buenos centros, buenos directores, necesitamos lderes
pedaggicos, no gestores.
Este estudio posee como gran potencialidad el contar con una gran cantidad de datos
obtenidos con un muestreo estadsticamente representativo para todo el Estado; por lo que su
validez externa, su capacidad de generalizacin, esta comprobada. Sin embargo, comparte la
limitacin con otros estudios que se tienen datos de la opinin de los directores sobre su
tiempo, no la realidad de dicha distribucin. Para este estudio en particular es una limitacin
que las categoras de distribucin del tiempo sean diferentes a las usadas en otros trabajos.
Sera positivo que el Instituto de Evaluacin mantuviera esas preguntas en futuras
978-84-695-8363-0
748
978-84-695-8363-0
749
978-84-695-8363-0
750
Resumen
Atendiendo a las dificultades que presentan las personas con Trastorno del Espectro Autista
(TEA) en cuanto al desarrollo de las competencias emocionales y sociales se refiere, hemos
llevado a cabo un proceso de investigacin en la accin, con el objetivo de demostrar la
importancia del desarrollo de dichas competencias en este tipo de personas desde una
perspectiva colaborativa entre la familia y la escuela principalmente, y la participacin de
otros agentes externos en el proceso. Para la obtencin de datos, nos hemos centrado en el
trabajo de las actividades para el desarrollo de competencias emocionales y sociales
recogidas en la propuesta educativa Aprende con Zapo (Lozano y Alcarz, 2009), tanto en
formato impreso como digital. Las actividades han sido trabajadas desde el mbito
educativo, por la profesora de Pedagoga Teraputica; desde el mbito familiar, por parte de
los padres; y por parte de agentes externos.
Descriptores: alumnado con TEA; colaboracin comunidad educativa-agentes externos;
habilidades emocionales y sociales.
Abstract
Attending to the difficulties that the persons present with Disorder of the Autistic Spectrum as
for the development of the emotional and social competences it refers, we have carried out a
process investigation (or research) in the action, with the aim to demonstrate the importance
of development of the above mentioned competences in this type of persons, across the
collaborative work between ( or among) the familiar and school area. In turn, we will bear in
mind the collaboration of external agents in this process. For the obtaining of information,
we have centred on the work of the activities for the development of emotional and social
quiet competences in the educational offer "Learn with Zapo"(Lozano & Alcarz, 2009), so
much in format printed like digital. The activities have been work out from the educational
area, for the teacher of Therapeutic Pedagogy; from the familiar area, on the part of the
parents; and on the part of external agents.
Keywords: students with autistic spectrum disorder; collaboration educative communityexternal agents; emotional and social skills.
978-84-695-8363-0
751
Introduccin
En la actualidad, los alumnos con TEA son considerados como alumnos con
necesidades especficas de apoyo educativo y, en base a ello, debemos favorecer su desarrollo
personal al mximo posible, centrndonos en la interaccin social y la comunicacin con los
otros como afirman Lozano y Alcarz (2012).
El Trastorno del Espectro Autista, tiene mltiples tipologas, manifestaciones y
caractersticas. Algunas de ellas pueden ser: alteraciones en la interaccin social; alteraciones
de la comunicacin; dificultad para expresar gestos, posturas y expresiones; patrones
restringidos de comportamiento, intereses y actividades.
Por otro lado, Lozano y Alcarz (2012), afirman la necesidad de tener en cuenta un
punto de gran inters, que no es otro que la educacin. La educacin contribuye a la mejora
de la calidad de vida y permite dar respuesta a algunas de las dificultades que presentan las
personas con TEA. Por tanto, se hace ineludible la necesidad de fomentar una escuela para
todos, una escuela inclusiva.
A la hora de trabajar con las personas con TEA, hemos de tener en cuenta las
necesidades que presentan desde una perspectiva interactiva, en la que se contemplen todos
los mbitos que conforman su contexto. Por eso Lozano y Alcarz (2010), afirman la
necesidad de establecer los procesos de enseanza-aprendizaje en contextos naturales para el
alumnado con TEA como seran el hogar o la escuela, permitiendo, por ende, la
generalizacin de este aprendizaje. Partiendo de esta premisa, resulta indispensable la
colaboracin entre la escuela y la familia en la intervencin con este alumnado.
La participacin de las familias para la toma de decisiones, tiene gran importancia para
el desarrollo de competencias en los alumnos con TEA (Lozano, 2010; Lozano, Alcaraz y
Cols a y b). Esta participacin debe darse en colaboracin con los docentes, sin entorpecer su
labor como profesionales, sino ms bien, complementndola y permitiendo as, el desarrollo
de una educacin de calidad para todos. Por su parte, la escuela, debe tener en cuenta la
opinin de la familia (Simpson, De Boer-Ott, Griswold, Myles, Byrd, Ganz, Cook, Otten,
Ben-Arieh, Kline y Adams, 2003).
Por otro lado, es importante destacar que, las familias, cuentan con una serie de formas
de apoyo que les permiten la participacin en el proceso de enseanza-aprendizaje de sus
hijos; una orientacin para el correcto tratamiento de su hijo en base a las caractersticas de
cada unidad familiar. A su vez, las familias precisan de profesionales adecuados para el
tratamiento de sus hijos que les generen la posibilidad de atender a las necesidades especficas
del mismo como son logopedas o profesores de apoyo, que permiten aportar otra visin y
forma de trabajo en cuanto al desarrollo de competencias emocionales se refiere (Bisquerra,
2000).
Desde la colaboracin familia-escuela, encontramos otro hecho de gran importancia,
y que se relaciona con la diferencia de percepcin de las necesidades del sujeto con TEA
desde la perspectiva familiar, si relacionamos la misma con la perspectiva profesional
(Dillenburger, Keenan, Doherty, Byrne y Gallagner, 2010).
En definitiva, resulta imprescindible la colaboracin familia y escuela en el desarrollo
de habilidades emocionales y sociales en los alumnos con TEA y en su generalizacin en
978-84-695-8363-0
752
978-84-695-8363-0
753
Por consiguiente, a lo largo del proceso se ha tenido en cuenta la colaboracin escuelafamilia-agentes externos para el desarrollo de estas actividades desde todos los mbitos.
Para el seguimiento del estudio y la valoracin del desarrollo del sujeto objeto de
estudio se han tenido en cuenta los testimonios de los participantes a lo largo del estudio; el
diario del profesor, entrevistas a los participantes; los resultados de la escala valorativa de
habilidades emocionales y sociales y la informacin fruto de la observacin de los
participantes en su trabajo con la alumna con TEA.
Resultados
De dnde partimos?
En primer lugar, tendremos en cuenta la informacin recogida durante la primera
entrevista llevada a cabo con la madre y la profesora de Pedagoga Teraputica de la nia.
Al inicio de este curso, se ha planteado la posibilidad de comenzar a trabajar las
competencias emocionales y sociales percibiendo gran predisposicin en cuanto a la
elaboracin de actividades de forma asertiva y eficaz. La experiencia ha resultado grata, pues
se observa un notable avance en cuanto a la actitud de la nia, observando tanto la profesora
de apoyo como la madre un avance, sobre todo, en cuanto al desarrollo de competencias
emocionales.
La profesora de PT manifiesta que la nia, es totalmente capaz de reconocer las
distintas emociones bsicas (alegra, tristeza, miedo, enfado) a travs de la expresin facial.
Por otro lado, es conveniente considerar que la nia, expresa emociones en el mbito
educativo, por ejemplo, a travs del llanto, cuando algo le disgusta, tal como se contempla en
el siguiente comentario de la docente:
Un da, se le insisti mucho en que se comiera el bocadillo. La nia no quera el
bocadillo y lo expres a travs del llanto desconsolado. No emple la palabra pero no par de
llorar hasta que dieron con lo que le disgustaba.
En cuanto a su actitud en el mbito familiar, cabe destacar que, segn manifiesta la
madre, la nia es capaz de reconocer emociones y sentimientos. Normalmente, suele darse
cuenta de las situaciones que surgen en el da a da familiar, atribuyendo estados anmicos a
determinadas circunstancias. Por otro lado, la nia se da cuenta de todo lo que ocurre en casa,
se extraa e incluso pregunta: Por qu pasa esto?
Es importante tener en cuenta que, tanto la madre como la profesora de PT exponen
que, posiblemente, el reconocimiento de las emociones lo hace en base a los gestos, aunque
dudan de la capacidad de la nia para responder a la pregunta en qu te fijas para saber que
mam est contenta?, por ejemplo. Ambas coinciden en la mayor capacidad de la nia para la
apreciacin de la emocin de alegra en comparacin con el resto de emociones bsicas,
probablemente por fijarse en los gestos que se hacen con la boca.
978-84-695-8363-0
754
978-84-695-8363-0
755
refirindose a s mismo y a los otros. La profesora afirma que la nia, casi nunca es capaz de
ello.
En cuanto a los tem 2 y 16, observamos que la madre se muestra ms estricta a la hora
de proporcionar una puntuacin. La madre afirma que la nia a veces sonre cuando el otro
sonre; mientras la profesora afirma que esto lo hace casi siempre. Por otro lado, la madre
opina que ante un grupo de nios, la nia casi nunca pide cooperar; mientras que la profesora
afirma que a veces s que pide cooperar.
Finalmente, la mayor diferencia en cuanto a percepcin se refiere la encontramos en el
tem 13; en el que la madre afirma que la nia casi siempre se siente interesada, aburrida,
sorprendida o pensativa en una situacin generadora de tal emocin. Sin embargo, la
profesora expone que casi nunca siente las emociones complejas en situaciones generadoras
de las mismas.
Existe una evolucin en cuanto al desarrollo de habilidades emocionales y sociales se
tras el trabajo de las mismas a partir de la propuesta didctica Aprende con Zapo
(Lozano y Alcarz, 2009)?
Tras la cumplimentacin de la escala valorativa sobre el desarrollo de habilidades
emocionales y sociales en personas con TEA por parte de todos los participantes en el estudio
y la aplicacin de la propuesta didctica mencionada desde los distintos mbitos; se llev a
cabo una sesin de reflexin en la que nos preguntamos por la evolucin del desarrollo de
dichas habilidades por parte de la nia, sujeto de nuestra investigacin.
Las conclusiones a las que llegamos fueron las siguientes:
- Ha mejorado en las situaciones que requieren contacto y comunicacin con otras personas.
- Automatiza la cuestinPor qu?; al preguntarle por cualquier emocin, ya que trabaja mucho
este aspecto. Esto es muy importante, debido a que las personas con TEA no comprenden
emociones; con lo cual, al preguntar el Por qu, nos aseguramos que, a travs de la respuesta que
nos da, es capaz de identificar las diversas emociones en otras personas. Es importante destacar
que, por el momento, solo hemos trabajado emociones bsicas (alegra, tristeza, enfado y miedo).
- En el patio suele estar cerca de la cuidadora ya que las nias con las que juega se ubican por esa
zona. Se relaciona con otras nias; quiere jugar y estar con ellas.
- Tiene adquirido el juego simblico, aspecto de gran importancia ya que permite atribuir al juego
situaciones o aspectos reales que conlleven un smbolo para las dems personas. A su vez, es
importante destacar que acepta las normas de juego, lo que le facilita la relacin con los otros nios
y nias.
- Es capaz de manejar el ordenador perfectamente, de unir dibujos y trminos, lo que nos indica su
capacidad para captar el simbolismo.
- En clase, los alumnos se encuentran distribuidos en grupos. La nia manifiesta su predisposicin y
ganas a formar parte de los grupos creados por los compaeros.
- La profesora de apoyo, manifiesta la predisposicin de la nia a trabajar y a colaborar en todas las
actividades, percibiendo gran mejora desde el inicio del curso hasta la actualidad.
978-84-695-8363-0
756
- El trabajo de los materiales en formato digital, tal y como comenta la profesora de apoyo externa ha
fomentado la motivacin de la nia en cuanto al trabajo de las habilidades emocionales y sociales
se refiere, cogiendo a su vez gran soltura en el manejo del ordenador. La utilizacin del ordenador
le gusta mucho y eso la motiva.
- En algunos casos se han trabajado historias sociales a partir de situaciones problemticas que han
ido surgiendo en el da a da. Las historias sociales han sido entendidas por la nia, de tal modo
que, tras el trabajo de las mismas, las situaciones problemticas no se han vuelto a repetir,
permitindonos este hecho tener en cuenta la posible generalizacin de aprendizajes.
978-84-695-8363-0
757
trminos como contento, triste, creer, pensar refirindose a s mismo y a los otros; la madre
afirma que la nia lo hace a veces, mientras que la profesora afirma que no lo hace casi nunca.
Esta diferencia de percepcin puede deberse a que, la madre se muestre de algn modo
reacia a admitir la falta de capacidad de la nia en determinadas ocasiones o porque en el
contexto familiar la alumna es capaz de tener una evolucin mayor.
En lo referido a si sonre cuando el otro sonre o pide cooperar ante un grupo, la madre
se muestra ms estricta a la hora de proporcionar puntuacin, debido probablemente al apego
que existe entre madre e hija, de modo que a la hora de jugar, la nia prefiera estar con la
madre. En el caso del colegio, al no estar la madre, la nia se abre ms a otras personas y a
sus compaeros.
La mayor diferencia la encontramos en la percepcin de inters, aburrimiento,
sorpresa o pensamiento ante una situacin que provoque estas emociones; en la que la
profesora otorga una puntuacin muy inferior a la madre. Esto puede deberse a la posibilidad
de que la madre confunda la expresin de estos sentimientos probablemente por las ganas de
que su hija los manifieste, o porque en el contexto familiar tenga un comportamiento
diferente.
Es importante tener en cuenta que el trabajo de las habilidades emocionales y sociales
con los alumnos con TEA implica un gran avance para el desarrollo de los mismos y, con lo
cual, puede tener gran implicacin para la mejor insercin de estos en la sociedad. Tambin
hay que considerar, por los comentarios de la docente, que el trabajo de estas competencias
supone una mejora en el rendimiento del alumnado con TEA, pues al desarrollar estas
habilidades, mejoran la relacin con la gente que les rodea y en los diferentes entornos en los
que interacta da a da, permitiendo as un mayor desarrollo en los mismos, tal como nos han
comentado la madre y la profesora de apoyo externo.
Referencias
Bisquerra, R. (2000). Educacin emocional y bienestar. Barcelona: Praxis.
Dillenburger, K., Keenan, M., Doherty, A., Byrne, T. y Gallagher, S. (2010). Living with
children diagnosed with autistic spectrum disorder: parental and professional views.
British Journal of Special Education, 37 (1), 13-30.
Lozano, J. y Alcaraz, S. (2009). Aprende con Zapo. Propuestas didcticas para el
aprendizaje de habilidades emocionales y sociales. Madrid: Wolters Kluwer.
Lozano, J. (2010). Trastornos del espectro autista y familia. Padres y Maestros, 301, 21-26.
Lozano, J. y Alcaraz, S. (2012).Respuesta educativa al alumnado con trastornos del espectro
autista. Madrid: La Muralla.
Lozano, J. Alcaraz, S. y Cols, P. (2010a). Experiencia educativa sobre la comprensin de
emociones y creencias en alumnado con trastornos del espectro autista. Revista de
Investigacin (RIE), Vol. 28, 65-78.
978-84-695-8363-0
758
978-84-695-8363-0
759
Resumen
La coleccin de materiales didcticos Aprendiendo el Lenguaje con Nora elaborados e
implementados en diversos centros de Educacin Infantil y Primaria de la Regin de Murcia
recoge una serie de propuestas didcticas en formato papel y multimedia, que en torno a diez
unidades didcticas integradas, pretenden ayudar al alumnado a acceder al lenguaje en
contextos educativos con diversidad cultural y lingstica. Esta propuesta metodolgica
propone un proceso de enseanza-aprendizaje del espaol, en ocasiones como segunda
lengua, que da respuesta educativa a la diversidad de necesidades del alumnado que hay en
las aulas, bien por desconocimiento del idioma, bien por presentar dificultades de
aprendizaje o por requerir apoyo educativo por otras necesidades educativas especiales.
Estos materiales tienen la virtualidad de estar construidos respondiendo a las
recomendaciones planteadas por Marco Comn Europeo de Referencia de las Lenguas,
desarrollando todas las competencias que en ste se indican.
Descriptores: materiales didcticos, atencin a la diversidad, enseanza del espaol y
alumnado extranjero.
Abstract
The collection of materials "Nora learning the language" developed and implemented in
various centers and Primary Education of the Murcia region contains a number of didactic
multimedia on paper and that around ten integrated teaching units, intended help students
access the language in educational contexts with cultural and linguistic diversity. This
methodological proposal proposes a teaching-learning Spanish as a second language
sometimes, that responds to the diverse educational needs of students who are in classrooms,
either by ignorance of the language, either learning difficulties or require educational
support for other special educational needs. These materials have the virtue of being built in
response to the recommendations made by the Common European Framework of Reference
for Languages, developing all the skills listed therein.
Keywords: teaching materials, attention to diversity, teaching Spanish and foreign students.
35
Esta comunicacin recoge una sntesis de la investigacin titulada: Diseo e implementacin de un modelo
de acceso al lenguaje en contextos educativos interculturales y multilinges. Cdigo PIII.05.n 309. Financiada
por la Consejera de Educacin, Formacin y Empleo de la Regin de Murcia y el Instituto de Ciencias de la
Educacin de la Universidad de Murcia.
978-84-695-8363-0
760
Introduccin
Actualmente, en los centros educativos nos encontramos con alumnado procedente de
diferentes pases, con culturas y lenguas distintas y en un gran porcentaje de casos con
desconocimiento del castellano, lo que conlleva grandes dificultades para la comunidad
educativa que ha de propiciar una educacin de calidad para todos favoreciendo rpidamente
el acceso a la lengua del pas de acogida de aquellos que lo necesitan como escaln inicial
para llegar a los aprendizajes. (Essomba, 2006; Castella, 1999; Garca, 2004; Gineste, 2005;
Graeras, 2005; Martnez, 2003; Trujillo, 2007; Lozano, 2010; Lozano y otros, 2006, 2007,
2008 y 2010).
Esta dificultad aadida a la que plantea otro alumnado con necesidad especfica de
apoyo educativo por presentar necesidades educativas especiales relacionadas con el acceso al
lenguaje oral y al cdigo escrito, nos ha llevado al grupo que hemos elaborado estos
materiales a reflexionar e investigar sobre el modo de conseguir un medio que facilite el
acceso al lenguaje sabiendo estas realidades (Lozano, 2006 y 2010; Lozano y otros, 2006,
2007). El modo de favorecer un proceso de enseanza-aprendizaje donde se pudiese utilizar
un cdigo universal nos llev a elegir un sistema pictografiado, dado que las investigaciones
consultadas as como nuestra experiencia como docentes ( Arnaiz y Lozano, 1996; Calero y
otros, 1991; Cuetos, 1990 y 1991; Diez de Ulzurrun, 2005; Ferreiro y Teberosky, 1988; Fons,
2004; Lozano y otros, 1999 y 2006; Teberosky, 1991; Troncoso y del Cerro, 1999; Roca y
otros, 1998) nos haba demostrado, en distintas ocasiones, las virtudes de tal cdigo para
caminar hacia la lectoescritura. Por ello, tanto el material que hemos diseado para ser
utilizado por el alumno como el destinado al profesor se contempla siempre la asociacin del
pictograma con la palabra escrita. Esta palabra escrita tambin aparece en las distintas
propuestas relacionadas con el desarrollo del lenguaje oral, ya que, a diferencia de como
accedemos a nuestra lengua materna primero hablando y despus escribiendo, en este caso, se
favorecer, al mismo tiempo, el acceso al lenguaje oral y escrito.
La coleccin de materiales elaborados e implementados en diversos centros de
Educacin Infantil y Primaria de la Regin de Murcia recoge una serie de propuestas
didcticas en formato papel y multimedia, que en torno a diez unidades didcticas integradas,
pretenden ayudar al alumnado a acceder al lenguaje en contextos educativos con diversidad
cultural y lingstica. Esta propuesta metodolgica propone un proceso de enseanzaaprendizaje del espaol, en ocasiones como segunda lengua, que pretende dar respuesta
educativa a la diversidad de necesidades del alumnado que hay en las aulas, bien por
desconocimiento del idioma, bien por presentar dificultades de aprendizaje o por requerir
apoyo educativo por otras necesidades educativas especiales.
Una de las virtualidades de estos materiales consiste en la acomodacin al nivel de
competencia curricular del alumno, de modo que se facilita la personalizacin de la
enseanza, favoreciendo una enseanza multinivel que ayuda a dar respuesta a la diversidad
de necesidades educativas del alumnado que se presentan en el aula (Stainback, 2001;
Pujols, 2002 y 2004; Daz Aguado y Baraja, 1993) independientemente de que ste curse la
etapa de Educacin Infantil, Primaria como Secundaria (Lozano y Renou, 2010; Lozano,
Renou y Cerezo, 2010; Lozano, Cerezo y Angosto, 2010). De este modo, la propuesta de
trabajo que realizamos presenta diferentes grados de dificultad, que se contemplan tanto en el
978-84-695-8363-0
761
978-84-695-8363-0
762
Ilustracin 2: Ejemplo de vietas del CD interactivo del alumno que contempla la historia motivadora
Unidad didctica n 1: Nora en el colegio
Y finalmente y desde el CD del docente, ste encontrar una base de recursos que se
ponen a su disposicin de modo que pueda recoger otras muchas actividades para que,
partiendo del nivel de competencia curricular del alumno en cada caso particular, se puedan
seleccionar aquellas que ms se adecuen a sus caractersticas. As, en determinadas ocasiones,
el alumno precisar utilizar materiales de un nivel inferior cuando el desarrollo grafomotor no
978-84-695-8363-0
763
se haya llevado a cabo anteriormente, y en ese caso, tendr que utilizar actividades
relacionadas con la escritura de palabras y reconocimiento del grafema entre otros grafemas o
en el interior de palabra, escritura del grafema con el giro adecuado etc.; y en otros casos este
aspecto estar ms conseguido y se trabajarn slo los aspectos matemticos.
Tambin, y en la medida que planteamos el inters porque el alumno consiga un
conocimiento integrado, existir un apartado intercultural en el CD dirigido al docente, para
dar respuesta a distintos aspectos de inters relacionados con la cultura de los diferentes
pases de donde procede la mayora del alumnado que se encuentra en las aulas escolares.
Ilustracin 3: Pantalla del CD del banco de recursos del docente donde se contemplan los distintos
apartados
Resultados y conclusiones
Los materiales que presentamos tienen la virtud de haber sido implementados en
centros de Educacin Infantil y Primaria de la Regin de Murcia donde, actualmente, estn
escolarizados alumnos extranjeros y otros que presentan necesidad especfica de apoyo
educativo. Consideramos que destacar este hecho es importante de cara a justificar que los
resultados son satisfactorios, por ello a continuacin vamos a contemplar algunas
conclusiones que se han extrado de las aportaciones de los docentes que han experimentado
con los materiales y que han sido expuestas en diversos seminarios de trabajo a lo largo de
dos cursos que ha durado la investigacin. Para ello se ha realizado la valoracin desde tres
mbitos fundamentalmente, ya que la totalidad de las conclusiones obtenidas nos van a
proporcionar un conocimiento global de las aportaciones de estos materiales tanto para los
alumnos como para los docentes; tambin van a servir de evaluacin de ellos con el objeto de
que, posteriormente, puedan ser mejorados en aquellos aspectos que se vean deficitarios.
978-84-695-8363-0
764
En relacin con los beneficios aportados a los alumnos, hemos observado que, de
manera genrica, estos materiales han conseguido el objetivo para el cual fueron diseados, la
adquisicin del espaol por parte del alumnado que tena una competencia lingstica en
nuestro idioma muy baja. Respecto de los materiales podemos establecer, como hemos ido
marcando anteriormente, la utilidad de ellos para la enseanza del espaol as como para dar
respuesta a otras necesidades que se planteen en el centro. Tenemos que ser conscientes, por
otro lado, que esta coleccin de materiales han constituido unidades didcticas integradas de
conocimiento donde se han trabajado distintas parcelas del mismo de un modo globalizado, de
modo que el alumno, adems de adquirir la competencia lingstica, ha adquirido la
matemtica, la artstica, la del conocimiento e integracin con el mundo fsico, etc. Nuestra
experiencia investigadora en los beneficios de la integracin curricular (Lozano e Illn, 2001;
Lozano, Cerezo y Angosto, 2010; Lozano y Zapata, 2010; Lozano y Renou, 2010) nos ha
vuelto a dar la razn sobre los avances del alumnado con la utilizacin de las unidades
didcticas integradas, ya que en torno a un tpico de inters han construido el conocimiento
desde la integracin de varias disciplinas.
Ya, por ltimo, vamos a centrar nuestras reflexiones sobre las opiniones aportadas por
los docentes, tanto de los miembros del equipo de investigacin como los maestros de los
centros donde se han implementado los materiales, quienes han destacado la importancia del
vocabulario pictografiado y su utilidad en todas las reas de enseanza. Por ltimo, los
maestros han destacado que los materiales aumentan la socializacin y motivacin del
alumno y la personalizacin del aprendizaje puesto que son materiales que no suponen mucha
dificultad para los alumnos y pueden trabajar de forma autnoma, con la colaboracin en
ocasiones de un compaero tutor pero dentro de su grupo de referencia, aumentando as sus
lazos con sus compaeros y adaptndose mejor a su nueva situacin. El CD del docente como
centro de recursos ha favorecido que ste tenga siempre a la mano una batera de materiales
con distintos niveles de dificultad, lo que ha propiciado la personalizacin de la enseanza de
cada alumno, en la medida que ha seleccionado aquellos recursos que mejor se acomodaban al
nivel de competencia curricular del mismo independientemente del nivel educativo donde se
estuviese escolarizado. En ocasiones, segn comentaban los docentes, haba que trabajar el
desarrollo grafomotor con alumnado de procedencia china, marroqu, etc. escolarizado en el
segundo y tercer ciclo de educacin primaria dado que eran alumnos de incorporacin tarda
en el sistema educativo y no conocan la lengua y la escritura del pas de acogida.
En definitiva, y dado que no tenemos demasiado espacio para explicar ms detalles,
concluiremos exponiendo que los resultados obtenidos en la implementacin de estos
materiales en centros de educacin primaria y secundaria de la Regin de Murcia ha sido
satisfactoria tanto para el alumnado, quien ha logrado acceder al cdigo oral y escrito, como
para los docentes que han dispuesto de una coleccin de materiales que le han facilitado su
labor con los alumnos que presentan una necesidad especfica de apoyo educativo para
acceder al lenguaje en contextos educativos multilinges.
Referencias
Arnaiz, P. y Lozano, J. (1996). Proyecto curricular para la diversidad. Madrid: CCS.
Calero y otros (1991). Materiales curriculares para favorecer el acceso a la lectura en
Educacin Infantil. Madrid: Escuela Espaola.
978-84-695-8363-0
765
978-84-695-8363-0
766
978-84-695-8363-0
767
Troncoso, M.V. y Del Cerro, M. (1999). Sndrome de Down: lectura y escritura. Barcelona:
Masson.
Trujillo, F. (2007). Ensear nuevas lenguas en la escuela: L1, L2, LE, NL. Revista de
Educacin,(343), pp. 71-91.
978-84-695-8363-0
768
Resumen
Como se recoge en el Proyecto de Ley del Aprendizaje a lo largo de la vida de Euskadi
(2012), el impulso del aprendizaje a lo largo de la vida es una de las principales iniciativas
que orientan el proceso de modernizacin de Europa en el siglo XXI. Esta situacin requiere
un nuevo enfoque de la educacin y la formacin que aborde los nuevos retos de la sociedad
del conocimiento. En este contexto se est desarrollando el proyecto Aprendizaje en la
Familia subvencionado por la Diputacin de Guipuzcoa. La finalidad general del proyecto
es disear nuevos recursos educativos y audiovisuales para fomentar el aprendizaje a lo
largo de la vida en la familia, incorporando las nuevas tecnologas digitales e integrando
nuevas metodologas de formacin parental. La idea clave del proyecto es que la ciudadana
visualice el potencial del contexto familiar para generar, compartir e incorporar el
aprendizaje en el estilo de vida. En el trabajo se presentan las caractersticas, la
metodologa, el desarrollo y los resultados del proyecto.
Descriptores: aprendizaje y educacin en la familia, implicacin parental, aprendizaje a lo
largo de la vida, nuevas tecnologas y medios audiovisuales.
Introduccin
Como se recoge en el Proyecto de Ley del Aprendizaje a lo largo de la vida de
Euskadi (Gobierno Vasco, 2012), el impulso del aprendizaje a lo largo de la vida es una de las
principales iniciativas que orientan el proceso de modernizacin de Europa en el siglo XXI.
El incremento del nivel educativo de la poblacin y el aumento de la esperanza de vida
generan nuevas necesidades de aprendizaje relacionadas con el desarrollo personal. La rpida
evolucin de las tecnologas y del sistema productivo demanda una permanente adaptacin y
redefinicin de los aprendizajes, las competencias y las cualificaciones profesionales. Esta
situacin requiere un nuevo enfoque de la educacin y la formacin que aborde los nuevos
retos de la sociedad del conocimiento. Se hace necesario impulsar un sistema de aprendizaje a
lo largo de toda la vida desde la Educacin Infantil hasta despus de la jubilacin que busque
implicar al conjunto de la poblacin, asegure la adquisicin y desarrollo de las competencias
bsicas y promueva la integracin, participacin, iniciativa y creatividad de todas las
personas. Las exigencias de la sociedad del siglo XXI enfrentan a los sistemas educativos a
nuevos retos y respuestas. El impacto del denominado aprendizaje 2.0 y 3.0, las nuevas
formas de comunicacin y bsqueda de informacin, el dominio de las tecnologas digitales y
la posibilidad de entornos virtuales de aprendizaje estn significando una revolucin en los
procesos de enseanza y aprendizaje. El proyecto educativo de la Unin Europea para el ao
2020 ha definido como un principio fundamental la conformacin de un marco ms flexible
que incluya aquellos conocimientos y competencias adquiridas tanto en contextos formales
978-84-695-8363-0
769
978-84-695-8363-0
770
Fomentar una actitud positiva hacia el aprendizaje a lo largo de la vida en las familias.
978-84-695-8363-0
771
2. Difundir entre el profesorado, las Asociaciones de Madres y Padres del Alumnado de los
Centros educativos y la ciudadana de Guipuzcoa nuevos medios para fomentar la
colaboracin de las familias en la educacin del alumnado de Educacin Primaria y
Secundaria, incorporando las tecnologas de la informacin y el conocimiento.
3. Fomentar el uso de las TICS entre la ciudadana en Guipuzcoa. La utilizacin de los
recursos educativos y audiovisuales a travs de la pgina web puede fomentar la utilizacin de
las TICs en las familias y la ciudadana en general
Los resultados del proyecto son los siguientes:
Difusin del Programa entre las Asociaciones de Padres y Madres del Alumnado de los
centros educativos (educacin primaria y secundaria) y entre la ciudadana del territorio
de Gipuzkoa en general.
978-84-695-8363-0
772
978-84-695-8363-0
773
TEMAS DE
INTERS
1.1.- Aprendizaje
informal en la
vida cotidiana
PREGUNTAS PARA
LA REFLEXIN
Qu se aprende en
vida cotidiana en
familias?
Cmo
aprende y cmo
ensea?
la
las
se
se
TAREAS EDUCATIVAS
TAREA DE
PARTICIPACIN
CIUDADANA:
COMPARTIR
EXPERIENCIAS A TRAVS
DE LA WEB
A modo de ejemplo:
1.2.- Aprendizaje
de
habilidades
para vida familiar
1.3.- Aprendizaje
de la participacin
cultural
y
comunitaria
Acordar en la familia la
distribucin de las tareas
familiares para fomentar el
aprendizaje de las habilidades
para la vida familiar de forma
igualitaria.
Planificar conjuntamente
actividades de ocio
participando en la vida cultural
y comunitaria.
Experiencias de aprendizaje
participando en la vida cultural
y comunitaria
PREGUNTAS PARA LA
REFLEXIN
TAREAS EDUCATIVAS
2.1.Creencias
acerca
del
aprendizaje
2.2. - Estilo
educativo parental
TAREA
2:
Seleccionar
alguno de los objetivos y
estrategias
educativas
presentadas en el mdulo 2 y
ponerlas en prctica en mi
familia.
2.3.Relacin
educativa
y
organizacin del
entorno educativo
familiar
TAREA DE
PARTICIPACIN
CIUDADANA:
COMPARTIR
EXPERIENCIAS A
TRAVS DE LA WEB
Creencias
acerca
aprendizaje escolar
del
A modo de ejemplo:
Mejorar la relacin de
colaboracin en el proceso
de aprendizaje cuando mi
hijo o hija realiza las
tareas escolares.
Participar
en
las
978-84-695-8363-0
774
PREGUNTAS PARA LA
REFLEXIN
TAREAS EDUCATIVAS
2.4.- Estratgias de
enseanza
Qu estrategias educativas
puedo utilizar para fomentar el
desarrollo cognitivo de mi hijo o
hija (creatividad, pensamiento
analtico, ponerse en el lugar de
los dems etc..?
2.5.- Colaboracin
entre la familia, la
escuela
y
la
comunidad
actividades
que
nos
propone
el
Centro
educativo
(reuniones,
conferencias etc..)
TAREA DE
PARTICIPACIN
CIUDADANA:
COMPARTIR
EXPERIENCIAS A
TRAVS DE LA WEB
Experiencias de aprendizaje
creativo en la familia
978-84-695-8363-0
775
2) propone a los padres y las madres un espacio para reflexionar sobre su papel de mediadores
educativos en el aprendizaje y la educacin de sus hijos e hijas.
3) posibilita que la ciudadana comparta sus opiniones y experiencias de enseanzaaprendizaje en la vida cotidiana familiar.
4) difunde las experiencias que promueven los centros educativos para fomentar la
participacin de las familias.
Bibliografa
CEDEFOP (2008). Terminology of European education and training policy. A selection of
100 key terms. Blgica: Office for Official Publications of the European Communities.
Available
<http://
www.cedefop.europa.eu/etv/Upload/Information_resources/
Bookshop/369/4064_en.pdf.>
Cobo, C. y Moravec, J. W. (2011). Aprendizaje invisible. Hacia una nueva ecologa de la
educacin.
Barcelona:
Universitat
de
Barcelona.
Disponible
en
<www.aprendizajeinvisible.com>
Dewey, J. (1938). Experience and education. Nueva York: Collier Books.
Gobierno Vasco-Eusko Jaularitza (2012). Proyecto de Ley del Aprendizaje a lo largo de la
Vida en Euskadi. Disponible en <http://www.hezkuntza.ejgv.euskadi.net/r43573/es/contenidos/plan_programa_proyecto/py_ley_10/es_py_ley/adjuntos/ProLeyapr
endizaje%20cas.pdf>
Grant, L. (2009). Learning in families: A review of research evidence and the current
landscape of learning in families with digital technologies. Futurelab. Disponible en
<http://www2.futurelab.org.uk/resources/documents/project_reports/becta/Learning_i
n_Families_educators_report.pdf>
Ho, C. (2010). Intergenerational learning (between generation X & Y) in learning families: A
narrative inquiry. International Education Studies, 3(4).
Hollingworth S., Allen K., Abol K., Mansaray, A. & Rose, A. (2009). An exploration of
parents' engagement with their children's learning involving technologies. Becta.
Disponible
en
<http://webarchive.nationalarchives.gov.uk/20110130111510/research.becta.org.uk/in
dex.php?section=rh&catcode=_re_mr_02&rid=17152>
Scanzoni, J. (2000). Designing families, the search for self and community in the information
age. U.S.A.: Pine Forge Press.
Sutherland, A. & Thompson, B. (2003). Kidinfluence: The marketers guide to understanding
and researching generation Y-kids, tweens and teens. Canada: McGraw-Hill Ryerson.
978-84-695-8363-0
776
Resumen
La Unin Europea tiene el claro objetivo de desarrollar la competencia de las personas para el
aprendizaje permanente como una estrategia crucial tanto para el desarrollo econmico como
para la cohesin social (Consejo de Europa, 2000). En este sentido, la competencia de aprender
a aprender (el conocimiento, las habilidades, las actitudes y valores para el aprendizaje
permanente) se ha identificado como una de las ocho competencias clave (Comisin Europea,
2004). La importancia de esta competencia en el seno de la Unin se ha traducido en un
acercamiento tanto al concepto de Aprender a Aprender como a indicadores que faciliten su
medicin. En este contexto un grupo de profesores del Departamento de Educacin de la
Universidad Pontificia Comillas se plantean la necesidad de investigar los factores que
pueden estar incidiendo en el mal posicionamiento en medidas competenciales de los
estudiantes espaoles (por los Informes Pisa, PIRLS y TIMMS), detectar los problemas que
puedan estar afectando al rendimiento escolar y valorar qu aspectos destacan en el
aprendizaje que estn recibiendo para poder ofrecer mecanismos realistas y viables al
profesorado para la mejora de la calidad del aprendizaje de los alumnos. En esta
comunicacin presentamos algunos resultados de la aplicacin de un cuestionario on-line a
maestros de Educacin Primaria y profesores de Educacin Secundaria cuyo objetivo es la
recogida de informacin sobre variables que describan a los centros en cuanto a sus
caractersticas principales, la motivacin por trabajar en estas competencias y los factores que
puedan explicar problemas en la implantacin y gestin de la competencia en las aulas.
Descriptores: Competencias bsicas, Aprender a aprender, Educacin primaria y Educacin
secundaria.
Abstract
The European Union has the clear objective of developing peoples competences for lifelong
learning as a key strategy for both economic development and social cohesion (Council of
Europe, 2000). In this sense, the learning-to-learn competence (knowledge, skills, attitudes
and values for lifelong learning) has been identified as one of the eight key competences
(European Commission, 2004). The importance of this key competence has led to a stronger
focus on the concept of learning to learn and its measurement. Within this context, a faculty of
the Department of Education of the Universidad Pontificia Comillas expresses the need to
investigate the factors that may be influencing the poor positioning of Spanish students in
terms of competences, identify problems that may be impacting school performance and
978-84-695-8363-0
777
assess which aspects stand out in their learning methods in order to provide teachers with
realistic and feasible mechanisms with a view to improving the quality of student learning.
This paper introduces some of the results produced by an on-line survey conducted among
teachers of primary and secondary school. The purpose of this survey was to collect
information on variables that describe the schools in terms of their main characteristics,
motivation to work on these competences and the factors that may explain issues found in the
implementation and management of this competence in the classroom.
Keywords: Basic compentences, Learning-to-learn, Primary school education, Secondary
school education.
Introduccin
La Unin Europea tiene el claro objetivo de desarrollar la competencia de las personas
para el aprendizaje permanente como una estrategia crucial tanto para el desarrollo econmico
como para la cohesin social (Consejo de Europa, 2000). En este sentido, la competencia de
aprender a aprender (el conocimiento, las habilidades, las actitudes y valores para el aprendizaje
permanente) se ha identificado como una de las ocho competencias clave (Comisin Europea,
2004). La importancia de esta competencia en el seno de la Unin se ha traducido en un
acercamiento tanto al concepto de Aprender a Aprender como a indicadores que faciliten su
medicin. La necesidad de establecer indicadores de medicin de esta competencia tuvo un
empuje fundamental con la creacin del CRELL (Centre for Research on Lifelong Learning) en
el ao 2005, que junto con la Red Europea de Responsables de Polticas para la Evaluacin del
Sistema Educativo se propuso desarrollar un instrumento para medir la competencia de aprender
a aprender. Para ello, adems del lgico anlisis conceptual del la competencia, analizaron cuatro
instrumentos de evaluacin que hasta ese momento se haban desarrollado en Europa y cuyo
contenido poda aproximarse al de la medicin de la competencia de aprender a aprender.
(Hoskins & Fredriksson, 2008, p. 10):
Las pruebas en aprender a aprender, que haban sido elaboradas por la Universidad de
Helsinki dentro del proyecto "La vida como aprendizaje (LEARN), (Hautamki et al.,
2002)
El Inventario de aprendizaje permanente y eficaz (Effective Lifelong Learning
Inventory -ELLI), desarrollado por la Universidad de Bristol (Deakin-Crick, Broadfoot y
Claxton, 2004)
La prueba de competencias transversales desarrolladas por la Universidad de
Amsterdam (cross-curricular skills test-CCST) (Elshout-Mohr, Meijer, Oostdam y van
Gelderen, 2004)
Y la prueba de Metacognicin desarrollado por la Universidad Autnoma de Madrid
(Moreno, 2002).
Dos de estos instrumentos directamente no medan la competencia de Aprender a
Aprender, pero fueron analizados por su gran relacin con el constructo. Presentamos a
continuacin las dimensiones de los dos instrumentos que s medan directamente la competencia
978-84-695-8363-0
778
Dimensiones
978-84-695-8363-0
779
de
la
de
de
978-84-695-8363-0
780
la Comunidad de Madrid en el que recogemos informacin sobre las percepciones que stos
tienen sobre el desarrollo y evaluacin de esta competencia. En esta comunicacin
presentamos algunos resultados de la aplicacin del cuestionario a maestros de Educacin
Primaria y profesores de Educacin Secundaria en la primera fase de esta investigacin. La
competencia de Aprender a Aprender es una competencia central ya que entronca con los
supuestos tericos de un aprendizaje autorregulado. Sin embargo, la realidad es que el
desarrollo y la evaluacin de las competencias bsicas es un proceso lleno de problemas y
muy difcil de implantar eficazmente en las aulas. Por ello, uno de los objetivos principales
del proyecto de investigacin ANLISIS DEL NIVEL DE DESARROLLO DE LA
COMPETENCIA DE APRENDER A APRENDER EN LOS NIVELES DE EDUCACIN
PRIMARIA Y EDUCACIN SECUNDARIA OBLIGATORIA EN LA COMUNIDAD DE
MADRID es establecer vas de comunicacin y de trabajo conjunto con los centros escolares
para avanzar en el conocimiento de los factores que pueden estar incidiendo en una bajo
desarrollo de esta competencia y potenciar la puesta en marcha de metodologas viables de
desarrollo y evaluacin de competencias bsicas en las aulas.
Los principales objetivos que perseguimos con el proyecto de investigacin son los
siguientes:
Analizar cmo se ha legislado el desarrollo y evaluacin de la competencia bsica de
Aprender a aprender
Definir el concepto de Competencia de Aprender a Aprender desde la teora de la
Autorregulacin.
Conocer cmo se est desarrollando y evaluando la competencia de Aprender a
Aprender en diferentes reas en los niveles de Primaria y Secundaria
Conocer cmo se est actuando por parte de los orientadores educativos para el
desarrollo de la Competencia de Aprender a Aprender
Conocer en qu medida los profesores y gestores de los centros educativos consideran
relevante el desarrollo y evaluacin de esta competencia
Detectar qu obstculos hay en los centros educativos para lograr un desarrollo y una
evaluacin adecuada
Hacer propuestas sobre el diseo de metodologas adecuadas para el desarrollo y
evaluacin de esta competencia que sean aplicables para la realidad de las aulas y de las
diferentes reas
En esta primera fase del proceso y gracias a la informacin recogida con los cuestionarios
a Maestros y profesores de Secundaria y Bachillerato de la Comunidad de Madrid queremos
responder a las siguientes preguntas:
1. Consideran relevantes los docentes el desarrollo de las 8 competencias Bsicas en la
formacin de sus estudiantes?
2. Cules son las competencias que se consideran ms relevantes? Se diferencia el valor
dado a las competencias en las diferentes etapas educativas?
3. Consideran los docentes que en general los estudiantes tienen desarrolladas las
diferentes dimensiones de la competencia de Aprender a Aprender?
4. Han recibido los docentes formacin en el desarrollo de metodologas de aprendizaje y
de evaluacin en la competencia de Aprender a Aprender?
978-84-695-8363-0
781
978-84-695-8363-0
782
978-84-695-8363-0
783
978-84-695-8363-0
784
permitan hacer evidente su nivel de progresin. En los boletines de notas solo un 16% indican
dar indicadores de calificacin asociados a la competencia de Aprender a Aprender. No se
aprecian diferencias estadsticamente significativas en funcin de la etapa (p>0,05).
e. Centro considerado innovador en gestin por competencias
Solo el 41% de la muestra dice que en sus centros se han desarrollado iniciativas para
favorecer el desarrollo de la competencia de aprender a aprender. Un 22% de los docentes
consideran su centro como un centro innovador en el desarrollo de competencias.
f. Obstculos percibidos para su adecuado desarrollo
Qu obstculos creen que hay para un adecuado desarrollo y evaluacin de
competencias? Para facilitar el desarrollo y evaluacin de la Competencia de Aprender a
Aprender en los centros educativos, el 56% de los docentes consideran que hay que dar un mayor
impulso a la implicacin de los docentes en todo el proceso, en segundo lugar, el 55% consideran
que se necesita una mayor formacin en el rea, un 53% de los docentes creen que adems se
necesita mayor disponibilidad de tiempo y un 50% creen que es necesario una mayor
implicacin de los alumnos. nicamente el 22% de los docentes indican que se necesitara un
nmero mayor de recursos materiales y econmicos.
Discusin
Desde la Unin Europea se ha dado una gran importancia a la medicin de la
competencia de Aprender a Aprender como una estrategia crucial para el desarrollo econmico y
para la cohesin social de sus ciudadanos. En este sentido, los estudios sobre la calidad del
aprendizaje de los alumnos europeos y la evaluacin de su desarrollo competencial han resultado
ser unos slidos cimientos sobre los que construir un marco terico ms o menos consensuado
sobre las dimensiones que definen la Competencia de Aprender a Aprender. Sin embargo, estos
momentos de crisis econmica a nivel europeo han provocado que se paralicen la aplicacin de
las pruebas de medicin que estaban planificadas para avanzar en el diagnstico y desarrollo de
la competencia a favor del aprendizaje a lo largo de la vida. El acercamiento a la percepcin que
tienen los profesores en Espaa sobre la importancia que le dan al desarrollo y evaluacin de la
competencia de Aprender a Aprender y su implicacin en tareas de formacin y de diseo e
implantacin de metodologas de aprendizaje es el objetivo central la fase del proceso de
investigacin que presentamos en este trabajo. Los datos analizados nos permiten concluir que la
mayora de los docentes encuestados sitan la competencia de Aprender a Aprender como una de
las tres competencias ms importantes para la formacin de los estudiantes, sin embargo, el nivel
de desarrollo que perciben en sus alumnos es moderado. En este sentido, indican que stos
identifican mejor los hbitos de estudio, sus sentimientos, emociones y variables contextuales
que el control sobre cmo aprenden, sobre las estrategias de aprendizaje que emplean y el control
sobre sus propias emociones. Que el 87% de los docentes consideren necesario aumentar su nivel
de formacin en la competencia de Aprender a Aprender es una oportunidad para generar
estrategias de formacin ms adaptadas a sus necesidades, ya que es una realidad que se est
recibiendo formacin, pero sta no repercute en la sensacin de dominio pedaggico sobre esta
competencia. Gracias a la formacin recibida parece que el profesorado utiliza metodologas de
aprendizaje para el desarrollo de esta competencia, pero slo un 22% dicen utilizar instrumentos
para su evaluacin. El reto para los docentes es el diseo e implantacin de sistemas de
evaluacin que incluyan esta competencia. Cuando analizamos los obstculos percibidos por los
docentes para un adecuado desarrollo de la competencia, llama la atencin que los recursos
978-84-695-8363-0
785
materiales y econmicos no son para ellos los factores que ms lo impulsaran. Los factores que
para ellos afectaran ms en un adecuado desarrollo de sta seran una mayor implicacin de los
docentes, una mejor formacin en el rea y una mayor disponibilidad de tiempo.
Referencias
Bandura, A. (1991). Social cognitive theory of self-regulation. Organisational Behavior and
Human Decision Processes, 50, 248-287.
Carretero, R. y Fuentes, M. (2010). La competencia de aprender a aprender. Aula de
innovacin educativa, 192, 7-10.
Comisin Europea (2004). Competencias clave para el aprendizaje permanente. Un Marco
de Referencia Europeo. Disponible en
<http://ec.europa.eu/dgs/education_culture/publ/pdf/ll-learning/keycomp_es.pdf >
Fecha de consulta 20/04/2013
Consejo Europeo (2000). Conclusiones de la presidencia. Consejo europeo de Lisboa 23 y 24
marzo
2000.
Bruselas:
Consejo
de
Europa.
Disponible
en
<http://www.minhap.gob.es/Documentacion/Publico/SGPEDC/Estrategia%20de%20L
isboa.pdf> Fecha de consulta 20/04/2013
Deakin, R., Broadfoot, P. & Claxton, G. (2004). Developing an effective lifelong learning
inventory: The ELLI project. Assessment in Education, 11(3), 247-272.
Elshout-Mohr, M., Meijer, J., Oostdam, R. & Van Gelderen, A. (2004). CCST: A test for
cross-curricular skills. Amsterdam: SCO Kohnstamm Institution, University of
Amsterdam.
Gimeno Sacristn, J., Prez Gmez, A.I., Martnez Rodrguez, J.B. y otros (2011). Educar por
competencias, qu hay de nuevo? Madrid: Morata.
Hautamki, J., Arinen, P., Eronen, S., Hautamki, A., Kupianien, S., Lindblom, B.,
Niemivirta, M., Pakaslahti, L., Rantanen, P. y Scheinin, P. (2002). Assessing learningto-learn: A framework. Helsinki, Centre for Educational Assessment, Helsinki
University/National Board of Education.
Hoskins, B. y Fredriksson, U. (2006). Learning to learn a draft overview of key questions.
Disponible en <http://crell.jrc.ec.europa.eu/download/Conferences/L2Lnw1.pdf>
Fecha de consulta 20/04/2013.
Hoskins, B. y U. Fredriksson (2008). Learning to learn: What is it and can it be measured?
Disponible
en
<http://publications.jrc.ec.europa.eu/repository/bitstream/111111111/979/1/learning%
20to%20learn%20what%20is%20it%20and%20can%20it%20be%20measured%20fin
al.pdf> Fecha de consulta 20/04/2013.
Jornet, J.M., Garca-Bellido, R y Gonzlez, J. (2011). Evaluar la competencia aprender a
aprender: una propuesta metodolgica. Revista de Currculum y formacin del
978-84-695-8363-0
786
978-84-695-8363-0
787
Resumen
Los Sistemas de Gestin de la Calidad en los centros educativos han transformado los
procesos de mejora continua. Por ello, resulta imprescindible estudiar el impacto que la
implantacin de dichos sistemas ha supuesto, principalmente, para los procesos y los
resultados de los centros educativos. En concreto, es conveniente determinar cmo se ha
visto mejorada la dimensin de los procesos de enseanza-aprendizaje, en la que se observa
el anlisis del rendimiento de los alumnos, la implicacin de las familias, la metodologa
docente, la evaluacin educativa, la apreciacin de los valores y la tutora. La intencin del
presente estudio es profundizar en la existencia de posibles modificaciones relevantes y
sostenidas a lo largo del tiempo en los aspectos metodolgicos relativos a los procesos de
enseanza-aprendizaje, ahondando en la percepcin que los diferentes miembros del centro
tienen sobre las mejoras experimentadas gracias a la aplicacin continuada del sistema de
gestin de la calidad.
Descriptores: Sistema de gestin de la calidad, impacto, procesos de enseanza-aprendizaje,
evaluacin educativa, Modelo Europeo de Gestin de la Calidad-EFQM.
Abstract
Systems Quality Management in schools has become continuous improvement processes.
Therefore, it is essential to study the impact that the implementation of such systems has led
mainly to the processes and outcomes of schools. It is essential to determine how it has been
improved the size of the teaching-learning process, which shows the analysis of student
achievement, family involvement, teaching methodology, educational assessment, the
assessment values and mentoring. The primary objective of the study is to deepen the possible
existence of relevant and sustained changes over time in the methodological aspects related
to teaching-learning processes, deepening the perception that different members of the center
are on the improvements thanks the continued application management systems quality.
Keywords: System quality management, impact, teaching-learning processes, educational
assessment, European Foundation for Quality Management-EFQM.
978-84-695-8363-0
788
Introduccin
El objetivo de los sistemas de gestin de la calidad, presentes en muchas instituciones
educativas, es determinar los procesos de mejora continua de todos los elementos que
componen la vida escolar (Cedefop, 2011; Kaplan y Norton, 1996; Senge, 1990). No obstante,
muchos son los que cuestionan su necesidad para la institucin y su utilidad para el desarrollo
de un progreso continuo (Doherty, 2008; Van Berge, 1998).
Al igual que en el mbito internacional, la aplicacin de sistemas de gestin de la
calidad en el sector educativo de nuestro pas comenz en el mbito universitario,
trasladndose posteriormente al contexto de la enseanza bsica, fundamentalmente en
educacin primaria y secundaria. La implantacin de dichos sistemas se ha ido extendiendo
de manera progresiva a lo largo de las ltimas dos dcadas. Algunas de las administraciones
educativas han impulsado de manera decidida la implicacin de la gestin de la calidad,
facilitando los recursos y la formacin necesaria para su aplicacin, siendo el Modelo de
Excelencia EFQM el sistema ms utilizado en las escuelas espaolas (Martnez y Rioprez,
2005).
No obstante, el debate sobre la utilidad de estos sistemas se ha intensificado en poca
de crisis econmica, cuestionndose los recursos destinados a la gestin de calidad, as como
los resultados que de ellos se derivan. Sin embargo, se debe sealar que la progresiva
aplicacin de sistemas que gestionan la calidad educativa de las instituciones no se ha
sustentado con estudios rigurosos que analicen la significatividad de los cambios producidos
en los centros tras su implantacin, as como su sostenibilidad en el tiempo.
Dentro de los diversos elementos que se pueden analizar para descubrir el impacto que
produce el sistema de gestin de calidad en un centro educativo, resulta indispensable
centrarse en los procesos de enseanza-aprendizaje (Goldberg y Cole, 2002). No obstante,
considerar los procesos de enseanza-aprendizaje que tienen lugar en los centros educativos
es una tarea ardua, debido a las innumerables variables que intervienen (metodologas
didcticas, tipos de conocimientos, formas de comunicacin, recursos educativos,
competencias a desarrollar,).
Existen evidencias aportadas por varios estudios sobre la relacin entre las
condiciones y caractersticas del centro y el rendimiento acadmico de los alumnos (Hallinger
y Heck, 2010; Marzano, Walters y McNulty, 2005; Mehra y Rhee, 2009; MacNeil, Prater y
Busch, 2009). De igual manera, existen diversas lneas de investigacin que estudian cmo la
implantacin de sistemas de gestin de la calidad garantiza la mejora continua en la
institucin escolar (Lunenburg, 2010; Senlle y Stol, 1994). Sin embargo, interesa descubrir el
impacto que produce el sistema de gestin de la calidad en el centro (Harvey y Newton,
2004), valorando si a partir de su implantacin se activan procesos de evaluacin
sistematizados orientados a la mejora de los procesos de enseanza-aprendizaje (De Miguel y
Apodaca, 2009). Con ello se conseguira evaluar el cambio producido en aspectos como el
curriculum, los mtodos de enseanza-aprendizaje, los procesos de evaluacin, el uso de los
recursos educativos, etc. y su efectividad, derivado de la implantacin del sistema de gestin
de la calidad.
978-84-695-8363-0
789
Mtodo
Este estudio se enmarca dentro de la investigacin no experimental ex-post-facto, en
el que participaron 29 centros de Educacin Primaria y Secundaria de dos regiones espaolas
(Comunidad Autnoma de Castilla-Len y Comunidad Autnoma de Madrid), de los cules
el 51,9% eran centros pblicos, el 14,8% privados y el 33,3% privados subvencionados con
fondos pblicos. Una gran mayora de los centros trabaja con el Modelo EFQM (European
Foundation for Quality Management), mientras que una pequea parte de la muestra utilizan
ligeras adaptaciones del Modelo EFQM. El profesorado que particip en el estudio estaba
formado por un total de 709 sujetos (85% profesores, 15% cargos directivos), con una media
de edad de 43,5 aos (SD = 10,35).
Para la realizacin de este estudio se elabor un cuestionario como instrumento de
recogida de informacin utilizando una escala tipo Likert, formada por un conjunto de tems
referentes a los Procesos de Enseanza-Aprendizaje, establecindose cinco posibilidades de
respuesta a cada tem, donde 1 es la menor valoracin y 5 es la valoracin mayor.
La variable dependiente es el impacto de la implantacin de un sistema de gestin de
la calidad sobre el proceso de enseanza aprendizaje en los centros educativos, estructurada
en las siguientes subdimensiones:
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
Las variables categricas o clasificatorias que se incluyeron para analizar las posibles
diferencias en las variables dependientes y definir mejor la interpretacin de resultados
fueron:
978-84-695-8363-0
790
SUBDIMENSIONES
Anlisis del rendimiento de los alumnos.
Apreciacin de las actitudes y valores de los alumnos.
Implicacin de las familias.
Metodologa docente.
Evaluacin.
Tutora.
Valoracin general de la dimensin.
1
4
9
8
13
7
9
4
2
12
10
12
16
8
9
8
3
25
22
26
29
20
23
30
4
40
40
30
30
35
32
46
Descriptivos
5
18
21
24
13
31
27
12
3,57
3,55
3,50
3,18
3,78
3,57
3,60
S
1,04
1,17
1,13
1,19
1,13
1,19
0,94
3,55
978-84-695-8363-0
791
F
1
50,498
Sig.
0
Aos de
Implantacin
Tamao
Plantilla
Sig.
3,48
0,016
16,267
4,486
0,004
Tamao
Alumnos
Sig.
F
0
9,823
CC.AA
Sig.
0
36,27
10,479
4,156
0,006
101,85
15,879
8,023
8,358
18,644
15,764
5,423
0,001
7,989
4,231
0,002
85,625
6,258
10,897
8,944
t
5,239
Puesto
Sig.
t
0
6,032
4,031
8,868
7,317
4,796
10,36
Sig.
3,649
3,269
0,001
2,996
0,003
6
7
10,308
978-84-695-8363-0
792
53,282
14,381
11,231
5,584
10
35,55
4,93
0,007
4,014
0,003
5,678
11
26,258
5,161
0,006
3,554
0,007
6,05
12
76,692
7,048
4,944
0,001
7,084
13
81,76
11,232
9,765
8,312
14
21,513
5,301
0,001
3,584
0,007
6,09
15
17,504
5,689
0,001
3,961
0,003
5,014
16
93,641
16,904
10,888
8,722
17
21,363
3,688
0,006
4,762
18
17,215
3,439
0,001
19
8,324
3,301
0,001
20
59,362
5,862
0,001
12,055
8,768
6,122
21
72,214
9,209
16,882
10,638
6,817
22
42,541
6,625
23
72,094
8,032
5,569
0,004
4,555
0,001
5,171
24
96,677
9,458
6,81
0,001
7,744
6,388
25
40,835
5,2
5,907
10,467
4,753
0,003
0
0,009
Los anlisis diferenciales llevados a cabo (ANOVA - p0,01) segn la variable Tipo
de Centro, muestran diferencias claramente significativas en casi todos los tems de las
subdimensiones implicadas, lo que demuestra que el impacto de la implantacin de un sistema
de gestin de la calidad sobre los procesos de enseanza-aprendizaje difiere en funcin del
tipo de centro en el que se desarrolle, siendo los colegios privados subvencionados los que
obtienen mejores puntuaciones, seguidos de los colegios pblicos y los colegios privados (por
ese orden). Los anlisis diferenciales (ANOVA - p0,01) en funcin del nmero de Aos que
lleva implantado el Sistema de Gestin de la calidad han identificado que las diferencias de
medias son dispersas y menores que lo que cabra esperar entre los centros que llevan ms
tiempo con la implantacin del sistema de calidad y los que llevan menos.
El estudio diferencial de los tems del cuestionario en funcin al Tamao de la
Plantilla de Profesores (ANOVA - p0,01) arroja datos igualmente dispersos y bastante
irregulares, siendo su significatividad poco relevante, por lo que se puede determinar que esta
variable tiene escasa relacin con el impacto del sistema de gestin de la calidad en el proceso
de enseanza-aprendizaje. En la variable del Tamao del centro segn nmero de alumnos
el anlisis diferencial realizado (ANOVA - p0,01) aporta datos igualmente muy dispersos,
salvo en una de las subdimensiones estudiadas, la Metodologa Docente, una de las ms
importantes para la dimensin estudiada (Procesos de Enseanza-Aprendizaje) donde
encontramos que los tems que la componen se revelan significativos. Por ello, podemos decir
que el tamao del centro en funcin del nmero de alumnos es un factor decisivo, siendo el
impacto que tiene el sistema de gestin de la calidad en los procesos de enseanzaaprendizaje en relacin a la metodologa docente ms importante en los centros que tienen un
nmero de alumnos comprendido entre los 500 y 750.
Respecto a la variable Comunidad Autnoma de los centros que intervinieron en la
investigacin (t-Student - p0,01), encontramos que las diferencias obtienen unos valores de
significatividad muy claros en todos los tems, siendo estas consistentes a lo largo de todas las
dimensiones. Las diferencias entre los centros de las dos Comunidades Autnomas implicadas
en el estudio son favorables en todos los casos en la Comunidad de Castilla y Len.
978-84-695-8363-0
793
978-84-695-8363-0
794
Referencias
CEDEFOP (2011). Evaluation for improving student outcomes. Messages for quality
assurance Policies. Luxembourg: Publications Office of the European Union.
De Miguel, M. y Apodaca, P. (2009). Criterios para evaluar el impacto de los planes de
evaluacin de la calidad de la educacin superior. Revista de Educacin, 349, 295-310.
Doherty, G. D. (2008). On quality in education. Quality Assurance in Education, 16(3), 255265.
Flecha, R. (2012). European research, social innovation and successful cooperativist actions.
International Journal of Quality and Service Sciences, 4(4), 332 - 344.
Goldberg, J. S. y Cole, B. R. (2002). Quality management in education: building excellence
and equity in student performance. Quality Management Journal, 9(4), 8-22.
Hallinger, P. y Heckb, R. H. (2010). Collaborative leadership and school improvement:
understanding the impact on school capacity and student learning. School Leadership and
Management, 30(2), 95-110.
Harvey, L. y Newton, J. (2006). Transforming quality evaluation: moving on. En D.
Westerheijden, B. Stensaker y M. J. Rosa (Eds.), Quality Assurance in higher education:
trends in regulation, translation and transformation (pp. 225-245). Dordrecht: Springer.
Kaplan, R. S. y Norton, D. P. (1996). The Balanced Scorecard. Translating strategy into
action. Boston: Harvard Business School.
Lunenburg, F. C. (2010). Total quality management applied to schools. Disponible en:
http://www.nationalforum.com/Electronic%20Journal%20Volumes/Lunenburg,%20Fred%
20C.%20Total%20Quality%20Management%20Applied%20to%20Schools%20Schooling
%20V1%20N1%202010.pdf
MacNeil, A. J., Prater, D. L., y Busch, S. (2009). The effects of school culture and climate on
student achievement. International Journal of Leadership in Education, 12(1), 73-84.
Martnez, C. y Rioperez, N. (2005). El modelo de excelencia en la EFQM y su aplicacin para
la mejora de la calidad de los centros educativos. Educacin XXI, 8, 35-65.
Marzano, R. J., Waters, T. y McNulty, B. A. (2005). School leadership that works: from
research to results. Alexandria: Association for Supervision and Curriculum Development.
Mehra, S. y Rhee, M. (2009). On the application of quality management concepts in
education: An example of a korean classroom. International Journal of Quality &
Reliability Management, 26(4), 312-324.
Senge, P. (1990). The fifth discipline. The art and practice of the learning organization. New
York: Doubleday.
978-84-695-8363-0
795
Van Berghe, W. (1998). Aplicacin de las normas ISO 9000 a la enseanza y la formacin.
Revista Europea de la Formacin Profesional, 15, 21-30.
978-84-695-8363-0
796
Resumen
El fundamento de este estudio se bas en primer lugar, en averiguar las opiniones sobre
diversidad del aprendizaje, conducta y actitud (ACA) de alumnos y alumnas. El marco
metodolgico de esta investigacin fue un estudio de opiniones de 486 alumnos y alumnas
por el cuestionario VILLAPRTRV. Entre las conclusiones cabe destacar que los alumnos y
alumnas del centro educativo manifiestan diferencias significativas en la gestin informativa
de ACA por razones, fundamentalmente, de Ciclos de edad y Curso escolar, siendo
inapreciable la diferencia entre los estudiantes por razones de Gnero.
Descriptores: Tecnologa de la Informacin y la Comunicacin; Comunidades de
aprendizaje; Colaboracin e Inclusin; Experiencias de aprendizaje electrnico.
Abstract
The basis of that study was focused on guessing about people's opinions about diversity on
the learning process,behaviour, students' attitude belonging to an educational centre in
Tenerife. The methodological framework of this research was a study on 486 students'
opinions throughout a quiz. Among conclusions we must mention the fact that the students of
that educationaL centre show many important differences in the development of the
information of ACA due to reasons regarding age and level,coming out a very subtle
difference among students due to reasons concerning genre.
Keywords: Information technology and communication,
Collaboration and Inclusion, E-Learning Experiences.
Learning
Communities,
Introduccin
La comunidad educativa, y con ella los sistemas de enseanza, se encuentran en los
ltimos tiempos en constante transformacin, expandindose, diferencindose de lo que hasta
ahora conocamos en todo proceso de enseanza y aprendizaje. Las Tecnologas de la
Informacin y la Comunicacin (TIC), en pocos aos han aportado un carcter innovador y
transformador a la educacin, en cualquiera de sus etapas educativas. Igualmente, las TIC han
transformado el modo de concebir y acceder a la informacin, y con ella, la forma de ensear,
de desarrollar competencias, de adquirir capacidades, desarrollos cognoscitivos.
978-84-695-8363-0
797
Las TIC comenzaron a expresar en la vida de las aulas de las escuelas nuevos crculos
de aprendizaje, y con ello, nuevas relaciones entre el entorno y la escuela, nuevos modos de
concebir el trato entre iguales, y la forma de trabajar la colaboracin y cooperacin. De esta
forma, este estudio busca una aproximacin basada en la investigacin de las TIC para la
inclusin y la interculturalidad en un centro educativo de Tenerife, como vas de acceso,
alternativas, y con gran potencialidad para acercar a las personas que necesitan una atencin
especial a la comunicacin y a la informacin que les rodea, hacindoles formar parte de la
comunidad que les rodea (Alegre, 2008: 227).
Esta comunicacin centra su estudio en los educandos. La hiptesis de partida fue: la
visibilidad y el uso de las TIC en una comunidad educativa. La gestin informativa del
aprendizaje, conducta y actitud (ACA) de alumnos y alumnas a travs de las TIC mova las
interrelaciones padres-tutores de un centro educativo con validez creando una comunidad de
la prctica.
Respecto a la gestin informativa del aprendizaje, conducta y actitud (ACA) de
alumnos/as a travs de las TICS, nos basamos en trabajos e investigaciones entre los que cabe
destacar el del brasileo Napthine (2006: 121): La insistencia de los estudiantes acerca de
que tuvieran esquemas disponibles de la leccin entre los recursos Web, junto con la
evaluacin positiva de las instrucciones del profesor (tales como preguntas de discusin y
tareas para casa), apoy la visin constructivista de que la instruccin deba organizarse de
manera que permitiera que los alumnos "llenaran los vacos" y construyeran su aprendizaje.
De esta forma empezamos a dilucidar la necesidad que los estudiantes supieran gestionar su
aprendizaje, conducta y actitudes a travs de las TICS, permitiendo a travs de los principios
constructivistas que los alumnos/as se implicaran en el moldeamiento y de sus ideas sobre las
TICS, y a prosperar en su aprendizaje (Baskerville, 2012). Dow (2005: 10) sealara que de
implantarse los cursos de aprendizaje de los educandos a travs de las redes e internet, los
mtodos pedaggicos y la evaluacin se tendran que disear para crear las condiciones
necesarias que fomentasen el trabajo colaborativo y un espritu incluyente.
En cuanto a la tecnologa visual, informtica y manipulativa (VIM) como formacin
en lnea de alumnos/as y profesores, deba recoger como principio fundamental la
inclusividad, conveniencia, implicacin, eficacia, confianza y sostenibilidad (Aczel, Peake
y Hardy, 2008: 502-503), y que a su vez implicara la mejora de los resultados de aprendizaje
de los nios y nias.
La meta marcada en el estudio que presentamos son:
Anlisis de la tecnologa como sistema de gestin informativa del aprendizaje, conducta y
atencin (ACA) de estudiantes por razones de diversidad.
Como hiptesis presentamos:
H1: Los estudiantes del Colegio de Enseanzas Obligatorias Andrs Orozco de Arafo
(Tenerife) exteriorizaban diferencias significativas en la gestin informativa de ACA.
978-84-695-8363-0
798
Mtodo
Participaron en la meta del estudio que presenta esta comunicacin 486 estudiantes del
Colegio de Enseanzas Obligatorias Andrs Orozco de Arafo (Tenerife)
(http://ceoandresorozco.jimdo.com).
Se contemplaron variables demogrficas que haban permitido la descripcin y la
contrastacin de las hiptesis arriba enunciadas. As, las edades oscilaron entre los 8-10 aos
(n = 134, 27,6%), 11-12 aos (n = 176, 36,2%), 13-14 aos (n = 124, 25,5%), y 15-17 aos (n
= 52, 10,7%). Haban participado ms nias (n = 250, 51,4%), que nios (n = 236, 48,6%) en
este informe. El 99,4% de los estudiantes tena como identidad la nacionalidad espaola. La
representacin de alumnos y alumnas haba sido de ocho cursos de Educacin Primaria (EP) y
de Educacin Secundaria Obligatoria (ESO), que se distribuyeron as: 3 curso de EP (n = 66,
13,6%), 4 curso de EP (n = 72, 14,8%), 5 curso de EP (n = 54, 11,1%), 6 curso de EP (n =
64, 13,2%), 1 curso de ESO (n = 82, 16,9%), 2 curso de ESO (n = 44, 9,1%), 3 curso de
ESO (n = 70, 14,4%), y 4 curso de ESO (n = 34, 7%).
Respecto al instrumento de esta meta, se haba aplicado una adaptacin del
Cuestionario de Villar Angulo (2011) sobre Actitudes del Profesorado hacia el Aprendizaje
de la Tecnologa de la Realidad Virtual (VILLAPRTRV), en adelante abreviado Villar11,
dividido en dos secciones. En la primera seccin aparecan las variables demogrficas:
gnero, ciclo de edad y curso escolar. La segunda seccin haba declarado 36 tems para
captar las opiniones sobre las TICS. Los tems se agruparon en categoras: Imaginacin,
Interaccin, Colaboracin, Autoconcepto, Actitudes, Conductas, Comunidad y Diversidad. El
cuestionario se evalu siguiendo una escala tipo Likert de cinco puntos, desde el valor 1
(Totalmente en desacuerdo) al valor 5 (Completamente de acuerdo). El anlisis se realiz a
travs del Paquete estadstico SPSS (v.19).
Resultados
Anlisis descriptivo e inferencial de las variables y dimensiones del cuestionario aplicado
a los estudiantes (Villar11) para el estudio de la meta 1.
La fiabilidad de consistencia interna del cuestionario Villar11 se haba evaluado por
medio del alfa de Cronbach, que haba arrojado el valor de .860, que era suficiente para
garantizar la investigacin exploratoria de las actitudes de los estudiantes. Esta opinin la
haba mantenido Korkmaz (2012: 1165), cuando construy una escala de actitudes de
aprendizaje cooperativo en lnea: Un coeficiente de fiabilidad que es mayor que 0.70 se
acepta como una indicacin de la fiabilidad de la escala.
La Tabla 1 muestra las medias y las desviaciones tpicas promediadas de los tems
para cada una de las nueve dimensiones del cuestionario Villar11. Los valores de la media
para toda la muestra de estudiantes se haban situado en torno a las respuestas de indeciso y
de acuerdo del cuestionario, y los valores ms altos de la desviacin tpica, que haban
aludido a la dispersin de las puntuaciones individuales, se haban ubicado en las dimensiones
de Colaboracin y Comunidad, y el ms bajo en Conductas.
De otra parte, la Figura 1 ofrece una representacin grfica de los valores de las medias
de cada una de las dimensiones en funcin de los ocho niveles educativos que aglutinaban la
poblacin del CEO Andrs Orozco. En su conjunto, la dimensin Diversidad es la ms alta en
978-84-695-8363-0
799
D.T.
3.33
3.54
3.57
3.59
3.90
3.66
3.07
3.93
3.78
.858
.890
1.026
.878
.737
.835
1.045
.762
.880
Figura 1. Medias de las de las respuestas de la muestra de estudiantes, segn Nivel Educativo, del
CEO Andrs Orozco en las dimensiones del Villar11
978-84-695-8363-0
800
978-84-695-8363-0
801
factorial. En efecto, se haban definido los factores por los tems que contenan los mayores
pesos. Adems, se haba estimado que un tem perteneca a un factor cuando tena una
correlacin razonablemente alta (.30 o ms) y no eran mayores en otro factor; asimismo, se
haban tenido en cuenta aquellos factores constituidos por tres tems como mnimo. La matriz
de la estructura factorial haba quedado reducida a cinco factores y 18 tems (Tabla 2),
despus de desecharse siete factores (desde el 6 al 12) que haban contenido menos de tres
tems.
Tabla 2
Matriz de la estructura factorial rotada de Villar11
tems
F. 1
F. 2
F. 3
F. 4
F. 5
.637
.234
.038
.010
.081
.445
.123
.061
.116
.046
.418
-.401
.208
.078
-.067
.623
-0.21
.062
-1.25
.211
.748
.032
.172
.196
.119
.260
.718
.023
-0.21
-.021
.200
.478
.058
.168
.151
-0.42
.630
.212
-0.47
.078
.233
-0.50
.647
.085
.070
.183
.159
.361
.130
.230
.012
.190
.571
.021
.015
.214
-.113
.177
.541
.136
.180
.075
.001
.724
.200
-.106
.039
.098
.666
-.032
.166
.197
.066
.097
.487
-.003
-.101
.281
.135
.651
-.002
.295
-.085
.276
.447
.049
.068
-.111
.035
.763
978-84-695-8363-0
802
El primer factor (valor propio: 18,417%) estaba constituido por cinco tems de las
dimensiones Imaginacin (6 y 7) y Colaboracin (9, 10 y 11). El segundo factor (valor
propio: 7,005%) estaba formado por tres tems de las dimensiones Imaginacin (1),
Colaboracin (12) y Autoconcepto (14). El tercer factor (valor propio: 5,255%) estaba
integrado por tres tems de las dimensiones Imaginacin (3), Autoconcepto (15) y Conductas
(22). El cuarto factor (valor propio: 4,780%) estaba comprendido por tres tems de las
dimensiones Actitudes (18) e Indagacin (34 y 35). Finalmente, el quinto factor (valor propio:
4,617%) estaba conformado por cuatro tems de las dimensiones Actitudes (20), Conductas
(21), Diversidad (29) e Indagacin (36). En su conjunto, la varianza explicada por los 12
factores iniciales haba sido de 62,994%.
Discusin
Los hallazgos obtenidos han mostrado una evaluacin tendente al acuerdo de las
actitudes de los estudiantes hacia la tecnologa de la realidad virtual.
Se haba reducido a 18 el nmero de tems del cuestionario de Villar11 agrupados en
cinco factores que haban explicado el 31,179% de la varianza. La composicin de los cinco
factores haba originado una nueva denominacin de los mismos referida de la siguiente
forma: Factor I (Reciprocidad, integrado por cinco tems, de los cuales tres haban
pertenecido a la dimensin Colaboracin), que haba insinuado al principio del aprendizaje
situado en el que ste requera la interaccin social y la colaboracin; Factor II (Revelacin,
que haba constado de tres tems pertenecientes a tres dimensiones que enunciaban el
desvelamiento de las emociones personales a los dems), esquematizando de esta forma
alguno de los principios del aprendizaje experiencial que haba referido tiempo atrs que el
aprendizaje de una materia ocurra cuando era relevante para los intereses de un estudiante;
Factor III (Testimonio, que haba constatado tres tems pertenecientes a otras tantas
dimensiones que ilustraban una impresin personal del estudiante), que patentizaba la
disposicin de aprendizaje del estudiante o cmo la instruccin tena una premisa organizativa
en espiral que terminaba en datos alojados en internet; Factor IV (Pesquisa, que haba
equiparado tres tems pertenecientes a dos dimensiones, en las que apareca destacada
Indagacin), que haba referido un ambiente no directivo y apoyado en el andamiaje de la
instruccin de clase, y Factor V (Capacidad, que haba anotado cuatro tems pertenecientes
a otras tantas dimensiones que aleccionaban sobre la pericia del estudiante). En relacin con
este ltimo factor, de nuevo se haba hecho presente el debate de la competencia en oposicin
a capacidad que haban dirimido Phelps, Hase y Ellis (2005: 68) a favor del movimiento de
la capacidad del alumno como expresin de sujetos que saben aprender, son autosuficientes
y resuelven problemas de diversos ambientes, escolares, familiares o sociales.
Los alumnos no haban diferido significativamente de las alumnas, excepto en uno de
los 36 tems del cuestionario, perteneciente a la dimensin Imaginacin (Aunque no tengo
tiempo en clase ni en casa, me gustara tener tiempo para aprender a travs de internet y
programas interactivos")
Clasificados los estudiantes por la variable Ciclos de edad, haban mostrado
diferencias significativas entre s en algunos tems de seis dimensiones comunes: Interaccin,
Colaboracin, Actitudes, Conductas, Comunidad e Indagacin. Las diferencias ms
numerosas en cuanto al conjunto de tems de una dimensin fue por razones de la variable
Ciclo de edad en tres tems de la dimensin Conducta, y en particular en el tem: Aprendo
cada vez ms de nuevas tecnologas fuera de la clase y del colegio. A este respecto, Napthine
978-84-695-8363-0
803
(2006: 121) ya haba sealado que el acceso a los recursos basados en la Web desde casa
haban sido beneficiosos para el aprendizaje de los estudiantes de sus estudio. Mientras, las
diferencias ms numerosas en la variable Curso escolar por el nmero de tems (tres) se
haban producido en la variable Interaccin, y en particular en el tem Me gustan los juegos
de las mquinas o de internet en los que colaboramos varios compaeros o compaeras.
Referencias
Alegre, O.M. (2008). Diversidad de escenarios para variedad de usuarios: utilizacin de
portales y foros. En M.L. Sevillano (Coord.), Nuevas tecnologas en educacin social
(pp. 215-252). Madrid: McGraw Hill.
Aczel, J.C., Peake, S.R. y Hardy, P. (2008). Designing capacity-building in e-learning
expertise: Challenges and strategies. Computers & Education, 50(2), 499-510.
Baskerville, D. (2012). Integrating on-line technology into teaching activities to enhance
student and teacher learning in a New Zealand primary school. Technology, Pedagogy
and Education, 21(1), 119-135.
Dow, W. (2005). Developing inclusive communities of learners in technology education:
practical craft skills facilitator or hindrance. International Journal of Technology
and Design Education, 15, 517.
Korkmaz, . (2012). A validity and reliability study of the Online Cooperative Learning
Attitude Scale (OCLAS). Computers & Education, 59(4), 11621169
Phelps, R., Hase, S. y Ellis, A. (2005). Competency, capability, complexity and computers:
exploring a new model for conceptualising end-user computer education. British
Journal of Educational Technology, 36(1), 67-84.
Napthine, P. (2006). A study of the effectiveness of a web resource in supporting student
learning on a general certificate of secondary education course in information and
communications technology. Technology, Pedagogy and Education, 15(1), 107-123.
978-84-695-8363-0
804
Resumen
La finalidad de este trabajo fue la de adquirir informacin sobre el grado de incidencia del
consumo de alcohol en el alumnado de la Universidad de Huelva. Se plante la elaboracin
de un cuestionario con 5 apartados, 49 tems y 227 variables. La metodologa es de corte
cuantitativa y el anlisis de los datos se hizo a travs del programa informtico IBM SPSS 20
Statistics y del Microsoft Office Word 2007. La muestra elegida fue de 1165 estudiantes de
los tres Campus, de los cuales el 65,2% son mujeres y el 34,7% hombres. Se hizo el
porcentaje de alumnos matriculados en cada carrera y en cada curso para establecer la
muestra lo ms equitativa y representativa. El cuestionario se pas a estudiantes de 43
carreras. El 15,9% consume alcohol de baja graduacin 4-5 vasos semanales y el 17,1%
alcohol de alta graduacin en la variable 3-4 copas a la semana.
Descriptores: Consumo de alcohol; Cuestionario; Metodologa cuantitativa; Investigacin;
Anlisis de datos, Variables.
Abstract
The purpose of this study was to acquire information about the degree of incidence of alcohol
consumption in the students of the University of Huelva. It raised the development of a
questionnaire with five sections, 49 items and 227 variables. Cutting the methodology is
quantitative data analysis was done through the computer program SPSS 20 Statistics and
Microsoft Office Word 2007. The sample chosen was 1165 students in three campuses, of
which 65.2% were women and 34.7% men. Was made the percentage of students enrolled in
each race and in every way to establish the sample as fair and representative. The
questionnaire students passed 43 runs. The 15.9% alcohol low alcohol consumed 4-5 glasses
per week and 17.1% high grade alcohol in the variable 3-4 drinks a week.
Keywords: Alcohol consumption; Questionnaire; Quantitative methodology; Investigation;
Data Analysis; Variables.
Introduccin
A lo largo de la historia, las bebidas alcohlicas han estado presentes en prcticamente
todas las culturas y han sido consumidas con propsitos diferentes. Adems de sus
propiedades fsicas (como sustancias psicoactivas, capaces de alterar el estado anmico; como
lquidos, capaces de calmar la sed, etc.), las bebidas alcohlicas implican un conjunto de
significados simblicos, positivos y negativos. En algunas sociedades, como la occidental, el
978-84-695-8363-0
805
978-84-695-8363-0
806
Esta investigacin parte del estudio del consumo de alcohol en los estudiantes de la
Universidad de Huelva ya que se nos plantearon nuevos interrogantes y la toma de conciencia
de la necesidad de hacer un estudio que respondiera a todas las cuestiones que no fueron
estudiadas en esta Universidad del Suroeste de Espaa. El modelo de investigacin adoptado
ha sido mediante la aplicacin de una metodologa cuantitativa y para obtener la informacin
de este trabajo se elabor un cuestionario ab hoc, es decir, un cuestionario para esta
investigacin en concreto. La captacin de informacin a travs de la encuesta se realiz con
la colaboracin expresa de los individuos encuestados.
Mtodo
El mtodo acota y define lo relevante para el conocimiento y la reflexin sobre el
diseo de la investigacin que nos ayuda a definir el proceso, es decir, el modo en el que
hemos abordado el estudio del tema. Tambin nos permite obtener informacin a travs de la
recogida de los datos y, finalmente, comprobar si se han alcanzado los objetivos planteados,
por tanto, el mtodo que se utiliza en esta investigacin responde al modelo de investigacin
por encuesta y el instrumento utilizado fue el cuestionario diseado expresamente para este
trabajo. La estructura general de la investigacin la hemos planteado partiendo de la relacin
existente entre las variables de la investigacin y mediante la aplicacin del mtodo cientfico
que posibilitar abordar el fenmeno o problemtica definida.
Las etapas del proceso de investigacin y las acciones que se han realizado son:
Tabla 1
Etapas y acciones del proceso
ETAPAS
Elaboracin del proyecto
Realizacin de la
investigacin
Comunicacin de las
conclusiones
ACCIONES
Planificacin de la investigacin:
- Ttulo
- Introduccin
- Planteamiento del problema
- Objetivos
- Cronograma
- Marco terico
- Metodologa
Recogida y anlisis de los datos: proceso de recoleccin
de datos, plan de anlisis e interpretacin de los datos
Redaccin del informe con las conclusiones,
implicaciones, futuras lneas de investigacin y
limitaciones del estudio
978-84-695-8363-0
807
Frecuencia
760
404
1164
1
1165
Porcentaje
65.2
34.7
99.9
.1
100.0
978-84-695-8363-0
808
Frecuenci
a
114
206
206
494
140
5
1165
Porcentaj
e
9.8
17.7
17.7
42.4
12.0
.4
100.0
Total
Ninguno
1-3 vasos semanales
4-5 vasos semanales
1 vaso diario
2-3 vasos diarios
Ms de 4 vasos al da
Sexo
Mujer
Hombre
390
168
251
134
103
81
11
10
2
3
3
3
760
399
Total
558
385
184
21
5
6
1159
Observamos que tanto los hombres como las mujeres de la muestra consumen alcohol
de baja graduacin solamente en 1-3 vasos semanales. La diferencia entre ambos sexos es
significativa, siendo las mujeres las que ms consumen en todos los tramos menos en uno 2-3
vasos diarios en el que le supera el varn pero solamente en una persona. En el tramo Ms de
4 vasos al da tanto los universitarios como las universitarias se igualan pero en un porcentaje
muy bajo.
El dato relevante que observamos en la Tabla 3, consumo de alcohol de alta
graduacin, es que en las variables 5-10 copas a la semana y Ms de 10 copas a la semana el
hombre supera a la mujer, aunque en un porcentaje my bajo. En las dems variables, es la
mujer la que supera al hombre en el consumo de alcohol de alta graduacin.
978-84-695-8363-0
809
Tabla 5
Frecuencia por sexo del consumo de alcohol de alta graduacin
Indica tu nivel de
consumo de alcohol de
alta graduacin (solos o
combinados con
refrescos): whisky, ron,
ginebra...
Ninguno
Alguna vez al mes
1-2 copas a la semana
3-4 copas a la semana
5-10 copas a la semana
Ms de 10 copas a la
semana
Sexo
Mujer
Hombre
155
68
324
156
93
47
129
70
47
49
9
11
Total
757
401
Total
223
480
140
199
96
20
1158
Tabla 6
Consumo de alcohol de alta graduacin del padre (P), madre (M) y hermanos (H)
Nunca
Alguna vez al ao
1 vez al mes
2-4 veces al mes
Varias veces cada semana
Diariame nte
Total
Frecuencia
P
M
H
179 426 298
267 184 104
138 42
119
99
30
210
33
4
38
8
4
1
724 690
770
Porcentaje
P
M
H
15.4 36.6 25.6
22.9 15.8
8.9
11.8 3.6
10.2
8.5
2.61
8.0
2.8
3
3.3
7
3
1
62.1 59.2 66.1
Frecuenci
a
172
622
290
1086
Porcentaj
e
14.8
53.4
24.9
93.2
978-84-695-8363-0
810
Tabla 8
Actividad: deporte
No
S
Total
Frecuencia
432
693
1127
Porcentaje
37.1
59.5
96.7
Tabla 9
Actividad: escuchar msica
No
S
Total
Frecuencia
431
689
1121
Porcentaje
37.0
59.1
96.2
Frecuenci
a
135
74
89
304
Porcentaj
e
11.6
6.4
7.6
26.1
Discusin e implicaciones
Los datos analizados del programa informtico SPSS, nos revela que las mujeres
consumen menos alcohol de alta graduacin en un porcentaje mnimo que los varones. Donde
ms consumen son en los botellones y en las fiestas por igual. Son pocos los que manifiestan
que en su entorno familiar todos los componentes beben, el porcentaje establecido es que
suelen beber alcohol de alta graduacin, el padre y que la madre suele beber alcohol de baja
graduacin, aunque la mayora de los hermanos de los encuestados, superan al padre varas
veces cada semana. Un porcentaje mayoritario de encuestados manifiestan que aumentando la
oferta cultural se podra prevenir y reducir el consumo de alcohol; adems, consideran que las
actividades como el deporte y escuchar msica seran una alternativa para no consumir
alcohol en exceso. La mayora del alumnado entrevistado tiene poca informacin con respecto
a las enfermedades que puede originar el consumo de alcohol y que beben porque tienen
curiosidad de saber lo que se siente consumiendo excesivamente.
Referencias
Braudel, F. (1979). Civilisation matrielle, conomie et capitalisme, XV-XVIII sicle. Les
structures du quotidien, le possible et l'impossible. Paris: Armand Colin.
978-84-695-8363-0
811
978-84-695-8363-0
812
Resumen
Tal y como la investigacin sobre enseanza eficaz ha demostrado, las estrategias de
evaluacin que el docente utiliza en el aula es un factor directamente relacionado con el
aprendizaje de los estudiantes. Esta comunicacin pretende determinar la relacin entre la
forma de evaluar por parte de los docentes de educacin primaria en Espaa y el desempeo
acadmico de los estudiantes en competencia lingstica y competencia matemtica. Para
alcanzar este objetivo se ha realizado una explotacin especial de la Evaluacin General de
Diagnstico realizada en Espaa en el ao 2009 usando modelos multinivel de tres niveles de
anlisis (estudiante, aula y escuela). La muestra est conformada por 1.358 docentes y
28.708 estudiantes de 4 curso de educacin primaria. Los resultados muestran los efectos
que se generan sobre el aprendizaje de los estudiantes segn la estrategia de evaluacin que
desarrolle el docente.
Descriptores: Estrategias de evaluacin, Educacin primaria, Rendimiento acadmico,
Anlisis multinivel, Espaa.
Abstract
Teaching Effectiveness Research shows that classroom assessment strategies is a main factor
in the student performance. This paper aims to determine the relationship between classroom
assessment strategies and student performance in language and mathematics in Spain. To
achieve this objective we have made a special analysis of the General Diagnostic Assessment
conducted in Spain in 2009 using multilevel models with three levels of analysis (student,
classroom, and school). The sample was formed by 1,358 teachers and 28,708 students in 4th
year of primary education. The results show the effects that are generated on student learning
as the strategy to develop the teacher evaluation.
Keywords: Assessment strategies, Primary education, Academic performance, Multilevel
analysis, Spain.
Introduccin
La investigacin sobre eficacia escolar, as como sobre enseanza eficaz, ha
determinado que las estrategias de evaluacin y seguimiento de los estudiantes es un factor
asociado al desempeo acadmico. Desde el primer estudio sobre eficacia escolar,
978-84-695-8363-0
813
desarrollado por Weber (1971) se considera que la evaluacin es un factor que discrimina
entre buenas y malas escuelas. Siguiendo este mismo planteamiento, actualmente contamos
con cientos de investigaciones que abarcan la necesidad e importancia de la evaluacin de los
estudiantes, y su impacto sobre el desarrollo acadmico.
Las investigaciones que abarcan el estudio de las estrategias de evaluacin de los
estudiantes se encuentran en todo el globo. La revisin realizada se estructura en un primer
abordaje a los hallazgos encontrados a nivel internacional. A continuacin se completa la
revisin de la literatura con los hallazgos ms relevantes encontrados en Amrica Latina. Para
terminar se rescatan las principales aportaciones que aportadas al estudio de la evaluacin de
aula en el contexto espaol.
Revisin de la literatura
Una gran cantidad de investigaciones han puesto sobre la mesa la importancia de la
evaluacin de aula como elemento clave que ayude a lograr una enseanza eficaz.
Investigaciones como la de Weber (1971), la popular y controvertida elaborada por Edmonds
(1979), o por ejemplo, la revisin de investigaciones de Medley y Crook (1980) son tan slo
algunos ejemplos que comprueban que, desde los primeros estudios sobre enseanza eficaz, la
evaluacin ha sido el foco de muchas miradas y no menos preocupaciones. Si bien resulta
muy arriesgado delimitar en cinco los elementos que definen una enseanza eficaz (Edmons,
1979), no cabe lugar a duda que la evaluacin de aula es un elemento que afecta al
aprendizaje de los estudiantes.
Estudios como el elaborado por Carlson y Francis (2002), de carcter longitudinal,
demuestran que se puede incrementar el rendimiento de los estudiantes entre un 01 y 03
puntos si los docentes incorporan a su metodologa docente estrategias de evaluacin como la
correccin de los trabajos de los estudiantes. Por su parte, William, Lee, Harrison y Black
(2004) en su estudio realizado con 120 docentes de seis escuelas de etapa primaria del Reino
Unido, confirman que si el docente desarrolla una combinacin de estrategias que incluya:
cuestionamiento directo a los estudiantes, retroalimentacin, discutir con los estudiantes los
criterios de evaluacin, y proponer actividades de auto-evaluacin, los resultados de los
aprendizajes de los estudiantes aumentan en 032 puntos.
La investigacin refleja que los beneficios de la evaluacin de aula no es slo un
elemento que ayuda al desarrollo acadmico de los estudiantes. Por ejemplo, el trabajo
elaborado por Kyriakides, Creemers y Antoniou (2009) concluye que la evaluacin de aula
impacta sobre el desarrollo afectivo y psicomotor. Conclusiones que son avaladas por el
reciente estudio elaborado por Weurlander, Sderberg, Scheja, Hult y Wernerson (2012)
donde se demuestra que los estudiantes mejoran su nivel de motivacin hacia la asignatura si
se utiliza un conjunto combinado de estrategias de evaluacin para medir el rendimiento.
Dentro del contexto iberoamericano, la investigacin elaborada por Pinilla, Barrera
Perdomo, Soto Snchez, Parra Pineda, Rojas Soto, y Granados Patio en 2004 concluye que
el 73% de los estudiantes colombianos que formaron parte del estudio se sienten insatisfechos
con el uso de estrategias de evaluacin que favorezcan el conocimiento memorstico. En esta
misma lnea, el estudio elaborado por 2009 por Furlan, Snchez- Rosas, Heredia e Illbele a
estudiantes universitarios argentinos concluye que el uso de estrategias de evaluacin que
abarquen el estudio reflexivo, la bsqueda de ayuda acadmica y la regulacin genera en los
estudiantes confianza hacia sus propias capacidades hacia el estudio.
978-84-695-8363-0
814
978-84-695-8363-0
815
3 jk = 3 + 3 k + 3 jk
4 k = 4 + 4 k ..... 10 k = 10 + 10 k
Con:
[ ] ~ N (0,
0ijk
[ ] ~ N (0,
0 jk
[ ]
) : = 20
[ ]
) : = 20
[0 k ] ~ N (0, ) :
[ ]
= 20
978-84-695-8363-0
816
501,33 (1,16)
28,48 (0,64)
NS
-4,11 (2,05)S
778,44
33,52
7857,27
501,82 (1,16)
26,46 (0,65)
NS
-5,01 (2,01)
786,51
37,63
8104,70
MODELO FINAL
Competencia
Competencia
lingstica
matemtica
500,79 (1,15)
28,64 (0,69)
NS
-4,10 (2,01)
503,57 (1,45)
26,44 (0,65)
NS
-5,04 (2,10)
NS
NS
NS
NS
NS
3,32 (1,16)
-1,67 (0,80)
NS
NS
NS
NS
NS
NS
NS
NS
NS
774,88
33,35
7856.91
785,66
35,84
8104,61
978-84-695-8363-0
817
Nunca o
Algunas
Casi
veces
nunca
31,15
37,78
,90
4,51
45,57
22,52
,08
2,18
,08
1,13
12,80
62,58
12,76
42,14
,00
1,20
Casi
siempre
22,01
23,67
11,96
23,98
24,00
17,92
28,40
16,69
Siempre
9,06
70,92
19,95
73,76
74,79
6,70
16,70
82,11
978-84-695-8363-0
818
Tal y como muestran los resultados, los docentes realizan siempre o casi siempre
controles despus de cada tema o leccin (96,6%), corrigen los deberes y cuadernos (97,7%),
revisan las actividades hechas en clase (98,8%), y valoran el inters y la participacin en clase
de los estudiantes (98,8%).
Sin embargo, las tareas llevas a cabo slo algunas veces o casi nunca son pruebas
sobre conocimientos previos antes de cada tema (68,9%), controles escritos trimestrales
(68%), exmenes orales (75,3%), y valorar la autoevaluacin del alumnado (55%).
Discusin y conclusiones
Ms all de la descripcin de cules son las actividades de evaluacin ms comunes
entre los 1358 docentes de 50 escuelas de educacin primaria estudiadas de toda la geografa
espaola, los resultados obtenidos comprueban que la forma de evaluar por parte de los
docentes de educacin primaria en Espaa est relacionada con el desempeo acadmico de
los estudiantes en cuatro reas: competencia lingstica y competencia matemtica.
Ms novedoso resulta el detallado anlisis de qu actividades de evaluacin resultan
especialmente beneficiosas para el desempeo. Los datos indican que son dos:
Realizar controles despus de cada tema o leccin.
Corregir los deberes y cuadernos.
En todo caso, con esta investigacin se puede concluir la importancia de utilizar
variadas estrategias de evaluacin en la docencia mejora el rendimiento acadmico de los
estudiantes. Los resultados obtenidos son especialmente relevantes para ser utilizados en
futuros estudios que consideren las estrategias de evaluacin en diferentes pases o que
analicen el impacto de stas sobre aspectos de rendimiento no estrictamente acadmico como
son la competencia social y ciudadana.
Los resultados obtenidos permiten profundizar en el conocimiento de las escuelas, los
docentes y los estudiantes espaoles de Educacin Primaria. La mejora de la Educacin en
Espaa requiere de una atencin concreta a la evaluacin del aula.
Referencias
Edmonds, R. (1979). Effective schools for the urban poor. Educational Leadership, 37(1), 1524.
Furlan, L.A., Snchez-Rosas, J., Heredia, D., e Illbele, A. (2009). Estrategias de aprendizaje y
ansiedad ante los exmenes en estudiantes universitarios. Pensamiento Psicolgico,
5(12), 117-124.
Goldstein, H. (2005). Multilevel models. Londres: Halsted Press.
Instituto de Educacin (2010). Evaluacin de Diagnstico General (EDG) de Educacin
Primaria 2009. Ministerio de Educacin de Espaa: Instituto Nacional de Evaluacin.
978-84-695-8363-0
819
978-84-695-8363-0
820
Resumen
El presente trabajo forma parte del proyecto I+D+I EDU 2009-14773-C02 (Impacto de la
implantacin de Sistemas de Gestin de la Calidad en centros educativos), financiado por el
actual Ministerio de Economa y Competitividad. El objetivo del trabajo que se presenta es
evaluar el impacto de la implantacin del Modelo de Excelencia Europeo (EFQM) en los
sistemas de Comunicacin interna y las relaciones externas de centros educativos de dos
comunidades autnomas de Espaa. Para medir dicho impacto se ha aplicado un instrumento
de medida a profesores y equipo directivo de los centros, compuesto por 32 tems. Entre los
resultados ms relevantes obtenidos, cabe destacar el evidente impacto que la
implementacin del EFQM ha tenido en los sistemas analizados, encontrando diferencias
significativas en los resultados en funcin de variables categricas como el tipo de centro, el
tamao del centro o la Comunidad Autnoma.
Descriptores: EFQM, Calidad, Impacto, Sistema de comunicacin, Relaciones externas.
Abstract
This research is part of the project I+D+I EDU 2009-14773-C02 ("Impact of the
Implementation of Quality Management Systems in Schools"), funded by the current Ministry
of Economy and Competitiveness. The aim of the paper presented is to assess the impact of
the implementation of the European Foundation for Quality Management (EFQM) in the
systems of internal communication and external relations of schools in two Autonomous
Communities of Spain. To work out such an impact, a measuring instrument, set up by a total
of 32 items, has been applied to teachers and school management team. Among the most
relevant results obtained, it is worth mentioning the obvious impact that the implementation
of the EFQM has had on the analyzed systems, finding out significant differences in the
results based on categorical variables such as type or size of centre or Autonomous
Community.
Keywords: EFQM, Quality, Impact, Communication System, External Relations.
978-84-695-8363-0
821
Introduccin
La implantacin de Sistemas de Gestin de la Calidad para la mejora de los centros
educativos, as como los resultados parciales que estos sistemas producen en la mejora de las
relaciones, atencin a los clientes, etc. de las instituciones, son temas que han sido
ampliamente estudiados (Cantn y Arias, 2009; Lpez, 2010; Ramrez y Lorenzo, 2009 y
Martnez y Rioprez, 2005). Sin embargo, existe un vaco en la literatura cientfica acerca de
la consolidacin, a lo largo del tiempo, de una cultura de trabajo basada y orientada hacia la
calidad con resultados excelentes (Detert, Schroeder y Mauriel, 2000). Es decir, en este
campo son necesarias investigaciones que permitan conocer el verdadero impacto de los
Sistemas de Gestin de la Calidad, entendido ste como los cambios sustantivos y sostenibles
en el tiempo en las organizaciones, bien sea en la actitud del personal, en la forma de trabajar,
en el clima, en la cultura del centro o en la planificacin, evaluacin y en el desarrollo de las
organizaciones (Fernndez, 2012).
En la European Foundation for Quality Management (EFQM) -uno de los sistemas de
gestin de la calidad ms extendidos- se establecen como conceptos fundamentales de la
excelencia: el desarrollo, la implicacin y el reconocimiento de las personas, siendo as el
trabajo en equipo y la coordinacin elementos fundamentales. En este misma lnea, Price
(2012) seala la relevancia de la confianza interpersonal y su efecto en la cohesin de los
equipos y en la cooperacin, demostrando que a mayor confianza en los colegas de trabajo:
(a) ms fcilmente cada profesional mantendr una fuerte orientacin a equipos, (b) se
favorece la sistematizacin de vas eficaces de comunicacin, y (c) se mejoran y consolidan
los sistemas de relaciones externas de la institucin. Para todo ello, resulta esencial la
generacin de un sistema de Comunicacin horizontal y vertical eficiente (Robles-Garca,
Dierssen-Sotos, Martnez-Ochoa, Herrera-Carral, Daz-Mendi y Llorca-Daz, 2005), que
contribuya al logro de los objetivos previstos, favoreciendo tambin la gestin de los
procesos. En este sentido, dichos procesos han de entenderse como el conjunto de actividades
que interactan transformando los elementos de entrada en resultados. Los procesos suelen
ser interdepartamentales e implican, por tanto, una horizontalidad en la comunicacin
institucional. De igual modo, la EFQM seala la importancia de la comunicacin del centro
con elementos exteriores, por lo que incide, de manera especial, en el desarrollo de alianzas
con otras instituciones y organismos. De este modo, la relacin con proveedores, otros centros
educativos, etc. proporcionan un valor aadido al centro educativo.
Por todo ello, si bien el trabajo aqu presentado forma parte de una investigacin ms
amplia en la que se analiza el impacto de la implantacin de sistemas de la calidad en los
centros educativos (a travs de la configuracin de un detallado y completo sistema de
dimensiones, subdimensiones e indicadores), este estudio se centra en el anlisis del impacto
que la implantacin de la EFQM tiene en las dimensiones de comunicacin interna y de
relaciones exteriores de los centros escolares. En este sentido, el concepto de impacto hace
referencia a los efectos a largo plazo, y sostenibles en el tiempo, producidos como
consecuencia de una accin, proyecto o intervencin; en este caso, como consecuencia de la
implantacin de sistemas de calidad (Fernndez, 2013). De este modo, dicho impacto en la
dimensin de comunicacin se evala a travs de: (a) la modificacin o generacin de un
sistema de comunicacin vertical (de directivos al profesorado, departamento de orientacin a
profesores, etc.), y (b) la modificacin o generacin de un sistema de comunicacin horizontal
(ente profesores de las mismas o diferentes etapas, cursos y reas; entre el personal de
administracin y servicios de igual o diferente estamentos). Por su parte, en el sistema de
relaciones externas, se ha definido el impacto como el estado en que: (a) el centro ha
978-84-695-8363-0
822
establecido relaciones consistentes con los centros de la zona para realizar actividades
conjuntas de carcter cultural, deportivo, artstico, etc., (b) el equipo directivo ha
sistematizado una red de relaciones institucionales que considera importantes y beneficiosas
para el centro con partners, empresas, instituciones educativas, financieras, proveedores, etc.,
y (c) el centro ha institucionalizado alianzas con instancias interesantes que enriquecen su
labor educativa a nivel autonmico, nacional e internacional.
As pues, el objetivo de esta investigacin es evaluar el impacto de la implantacin de
la EFQM en los sistemas de comunicacin y las relaciones externas de centros educativos de
la Comunidad de Madrid y de la Comunidad de Castilla y Len. Adems, se pretende
observar si existen diferencias entre la percepcin de los profesores y del equipo directivo o
en funcin de una serie de variables como la titularidad del centro, Comunidad Autnoma,
tamao del centro o aos que lleva implantado el modelo.
Mtodo
Diseo
El diseo empleado en esta investigacin es no experimental de carcter exploratorio,
enmarcado dentro de los estudios ex-post-facto.
Muestra, instrumento y procedimiento
La muestra del estudio qued configurada por un total de 680 sujetos (574 profesores
y 106 miembros del equipo directivo) pertenecientes a un total de 29 centros educativos (14
de la Comunidad de Madrid y 15 de Castilla y Len).
Para medir el impacto que la EFQM ha podido tener en las dimensiones del sistema de
comunicacin y de relaciones de los centros, se utiliz un instrumento de medida elaborado
ad hoc configurado por un total de 30 tems donde profesores y miembros del equipo
directivo respondieron atendiendo a una escala de 1 a 5 de tipo Likert, complementado por un
breve cuestionario con variables categricas referidas al centro y al Sistema de Gestin de la
Calidad implantado (tipo de centro, nmero de alumnos y nmero de aos que lleva
implantado en el centro la EFQM).
Para conseguir la participacin de los sujetos se concert una entrevista inicial con los
directores de los centros, donde se explic el objetivo de estudio y el procedimiento a seguir.
Para la aplicacin de los cuestionarios, que tuvo lugar en el primer bimestre de 2012, los
miembros del equipo de investigacin se desplazaron a los centros en las fechas acordadas,
asegurando el total anonimato y confidencialidad de las valoraciones y resultados.
Resultados
Estudios descriptivos
Los resultados de los anlisis descriptivos (realizados con el paquete informtico SPSS
20) en la dimensin de Comunicacin (ver Tabla 1) mostraron, en trminos generales, una
puntuacin media de 3,5 (en una escala de 1 a 5 donde la media terica es 3) con una
desviacin tpica de 1. Un anlisis pormenorizado de los tems mostr que el aumento de las
TICS como medio de comunicacin (tem 1), la comunicacin entre equipo directivo y
978-84-695-8363-0
823
profesores (tem 6) y la comunicacin del centro hacia las familias (tem 9) obtuvieron
porcentajes de respuesta por encima del 62% en las valoraciones 4 y 5. En relacin con la
comunicacin horizontal en el centro % (tems 4 y 10), se observa que el 80% de las
puntuaciones se sitan, igualmente, entre los valores 3 y 4.
Tabla 1
Estudio descriptivo de los tems de la dimensin de Comunicaciones
1. Aumento de uso de TICs (e-mails, intranet, pgina web del centro, etc.)
2. Aumento del uso del buzn de sugerencias
3. Mejora de la sistematizacin de la comunicacin en el centro
4. Mejora de la sistematizacin de la comunicacin horizontal en el centro
5. Mejora de la evaluacin de los sistemas de comunicacin
6. Mejora de las vas de comunicacin del Eq. Directivo hacia los profesores
7. Mejora de las vas de comunicacin de coordinadores hacia profesores
8. Mejora de las vas de comunicacin del Dpto. de Orientacin (D.O.) hacia los profesores
9. Mejora de la eficacia de la comunicacin del centro hacia las familias
10. Mejora de la eficacia de las vas de comunicacin entre el profesorado
11. Mejora de las vas de comunicacin de los profesores hacia el Eq. Directivo
12. Mejora de las vas de comunicacin de los profesores hacia coordinadores
13. Mejora de las vas de comunicacin de los profesores hacia el D.O.
14. Mejora de la eficacia de la comunicacin de las familias hacia el centro
X
4,01
2,64
3,66
3,54
3,49
3,92
3,70
3,36
3,59
3,63
3,49
3,50
3,31
3,06
S
,872
1,16
,853
,865
1,00
,905
,980
1,06
1,22
1,00
1,00
1,01
1,07
1,21
La dimensin de Relaciones (ver Tabla 2) mostr una media general de 3,20 y una
desviacin tpica de 1,15. En el tem 16 (referido a la revisin sistemtica de las actividades
conjuntas con otros centros), se encontr que el 56% y el 40% de las respuestas corresponden
a las valoraciones 3-4 y 1-2, respectivamente. Algo parecido ocurri con los tems referidos a
los programas de movilidad (tems 21, 22, relativos a la prctica deportiva, e tem 23), donde
el 50% de las respuestas corresponden a las valoraciones 3 y 4, y el 40% a las puntuaciones 1
y 2. Los tems relacionados con el impacto que el Sistema de Gestin de la Calidad ha tenido
en la imagen, el prestigio y el reconocimiento del centro (tems 24, 25 y 26) mostraron
medias por encima de 3,5 y porcentajes de repuesta altos en las valoraciones 4 y 5 (61% en el
tem 24, 57% en el tem 25 y 70% en el tem 26).
Tabla 2
Estudio descriptivo de los tems de la dimensin de Relaciones
15.
16.
17.
18.
19.
20.
21.
22.
23.
24.
25.
26.
27.
28.
29.
30.
X
2,82
2,72
3,22
S
1,18
1,17
1,04
3,20
1,04
3,13
1,03
3,28
2,82
1,29
1,35
2,90
1,34
2,80
3,70
3,50
3,83
3,64
3,27
1,30
,972
1,16
1,09
1,04
1,23
3,25
1,24
2,92
1,26
978-84-695-8363-0
824
Estudios diferenciales
Al analizar las diferencias existentes en la dimensin de comunicacin (aplicando la
prueba ANOVA para grupos independientes), en funcin del tipo de centro (ver Tabal 3), se
encontraron diferencias estadsticamente significativas (p <.01) en los tems 4, 9 y 14 (ver
valores significativos de F en la tabla 3). Los contrastes posteriores (aplicando la prueba de
Scheff) revelan que la comunicacin entre centro y familias (tems 9 y 14) fueron
significativamente superiores en los centros concertados frente a los pblicos y privados,
siendo en stos ltimos, significativamente ms bajos tambin frente a los pblicos. Por otro
lado, los centros concertados mostraron valoraciones ms altas en la sistematizacin de la
comunicacin horizontal en el centro (tem 4) que los privados.
Tabla 3
Estudios diferenciales en el sistema de Comunicacin en funcin del tipo de centro
tem 4
tem 9
tem 14
Tipo de centro
Pblico
Privado
Concertado
Pblico
Privado
Concertado
Pblico
Privado
Concertado
N
217
134
329
217
134
329
217
134
329
Media
3,58
3,11*
3,69*
3,61*
2,62*
3,95*
3,03*
2,80*
3,68*
D.T.
,869
,699
,866
1,063
1,485
,982
,953
,984
,933
F*
23,60
64,84
43,02
Los estudios en funcin del tamao del centro (segn el nmero de alumnos)
mostraron que los centros grandes presentan niveles significativamente ms bajos que el resto
de centros en los tems 5 (sistematizacin de la evaluacin de la comunicacin), 8
(comunicacin del departamento de orientacin con los profesores) y 9 (comunicacin del
centro con las familias).
Segn el nmero de aos que lleva implantada la EFQM en el centro, se encontr que
los centros con 3-5 aos de implantacin del modelo presentan niveles significativamente ms
bajos que los que llevan con el modelo 6-8 aos, 9-12 aos o ms de 12 aos en los tems 9 y
14. De igual modo, en dichos tems, tambin se encontraron diferencias en funcin de la
Comunidad Autnoma (aplicando la prueba t student para grupos independientes),
mostrando niveles ms altos, en ambos tems, en la Comunidad de Castilla y Len (ver Tabla
4).
Tabla 4
Estudios diferenciales en el sistema de Comunicacin en funcin de la Comunidad Autnoma
Comunidad Autnoma
Castilla y Len
Com. Madrid
tem 14 Castilla y Len
Com. Madrid
tem 9
N
351
329
351
329
Media
4,07*
3,07*
3,49*
2,58*
D.T.
t*
,916 11,55
1,302
,989 10,36
1,255
978-84-695-8363-0
825
Comunidad
Autnoma
Castilla Len
Com. Madrid
Castilla Len
Com. Madrid
Castilla Len
Com. Madrid
Castilla Len
Com. Madrid
N
351
329
351
329
351
329
351
329
Media D.T.
3,09*
2,53*
3,88*
3,06*
3,58*
2,87*
3,27*
2,55*
1,250
1,400
,950
1,231
1,057
1,338
1,138
1,290
t*
5,322
9,390
7,372
7,353
En funcin del tamao del centro (segn el nmero de alumnos), se observ que los
centros grandes muestran valores significativamente ms bajos, respecto al resto, en lo
relativo a la imagen y reconocimientos del centro (tems 25 y 26), al aumento en la
realizacin de acciones para la mejora del prestigio del centro (tem 27).
Por ltimo, cabe sealar que los estudios diferenciales, atendiendo a las valoraciones
entre profesores y miembros del equipo directivo, no mostraron valores significativos.
Discusin
Los resultados de la investigacin realizada permiten afirmar que la implantacin la
EFQM en los centros estudiados ha tenido un impacto medio en los sistemas de
Comunicacin y de Relaciones de los mismos. En el caso del sistema de Comunicacin, la
978-84-695-8363-0
826
978-84-695-8363-0
827
Referencias
Cantn, I. y Arias, A. R. (2009). Metforas y teoras implcitas de los directores escolares.
Educacin XXI, 28(1). 227-248.
Detert, J.R., Schroeder, R.G. y Mauriel, J.J.(2000). A framework for linking culture and
improvement initiatives in organizations. Disponible en: http://wwwpersonal.umich.edu/~prestos/Downloads/DC/11-11_Detertetal2000.pdf
Fernndez, M J. (2013). Evaluacin del impacto para un cambio sostenible en las
organizaciones educativas. Revista Espaola de Pedagoga, 254, 45-65.
Gonzlez, I. (2011). Modelos de evaluacin de la calidad orientados a la mejora de las
instituciones
educativas.
Disponible
en:
http://www.uhu.es/publicaciones/ojs/index.php/xxi/article/view/657
Hill, S. (1991). Why quality circles failed but total quality management might succeed.
British Journal of Industrial Relations, 29(4), 541-598.
Lpez, P. (2010). El componente liderazgo en la validacin de un modelo de gestin escolar
hacia la calidad. Educao e Pesquisa, 36(3), 103-122.
Martnez, C. y Rioprez, N. (2005). El Modelo de excelencia de la EFQM y su aplicacin
para la mejora de la calidad. Educacin XXI, 8, 35-65.
Price, H. E. (2012). How affective relationships shape principal and teachers attitudes.
Educational Administration Quarterly, 48(1), 39-85.
Ramrez, A. y Lorenzo, E. (2009). Calidad y evaluacin de los centros educativos no
universitarios en Andaluca: una adaptacin de la EFQM. Revista Iberoamericana de
Evaluacin Educativa, 2(2), 22-45.
Robles-Garca, M., Dierssen-Sotos, T., Martnez-Ochoa, E., Herrera-Carral, P., Daz-Mendi,
A.R. y Llorca-Daz, J. (2005). Variables relacionadas con la satisfaccin laboral: un
estudio transversal a partir del modelo EFQM. Gaceta Sanitaria, 19 (2), 127-134.
978-84-695-8363-0
828
Resumen
Los beneficios de la participacin de los estudiantes en la evaluacin han sido ampliamente
demostrados por los trabajos de diferentes autores. Aqu, se presenta un estudio descriptivo,
en el contexto del Proyecto Re-Evala, en el que se llev a cabo una encuesta en la
asignatura Fundamentos de Direccin de la Universidad de Cdiz. Un total de 154
estudiantes pusieron en prctica modalidades evaluativas de carcter participativo. El
objetivo de la investigacin era analizar el grado la satisfaccin del alumnado sobre estas
prcticas. A travs de los resultados se extrae que el alumnado se siente satisfecho en las
prcticas de autoevaluacin y muestran ciertas reticencias en la evaluacin entre iguales.
Descriptores: Evaluacin entre iguales, Autoevaluacin, Educacin superior, Evaluacin
participativa, Evaluacin compartida.
Abstract
The benefits of student participation in assessment has been widely studied and proved by
many authors. In this paper a descriptive study, developed within the Re-Evala research
project, is presented. A questionnaire was applied in the module Management Body of
Knowledge at the University of Cdiz. 154 students participated in the assessment process as
self and peer assessors. The aim of the study was to analyse the satisfaction of students with
this practices, highlighting the perceived learning outcomes and limitations. Most of the
students manifest that they are satisfied with self and peer assessment practices, highlighting
their benefits, however many limitations were found. A reticence and distrust towards peer
assessment can be appreciated.
Keywords: Peer assessment, Self-assessment, Higher Education, Participatory assessment,
Cooperative assessment.
978-84-695-8363-0
829
Introduccin
Probado est que la evaluacin es un aspecto clave para mejorar el aprendizaje en
educacin superior, muchos son los autores que resaltan el impacto que tiene la evaluacin en
el alumnado (Boud y Molloy, 2012; Gil y Padilla, 2009; Ibarra y otros 2012). Los estudiantes
aprenden aquello que va a ser evaluado. La tarea de evaluacin diseada, as como el medio
de evaluacin utilizado tienen un factor muy importante en el tipo de aprendizaje que
desarrollar el alumnado. Existen numerosos estudios que resaltan los beneficios y riesgos del
uso de estrategias participativas de evaluacin como la autoevaluacin, evaluacin entre
iguales y evaluacin compartida. Autores como Boud y Molloy (2012) y Nicol (2009) entre
otros resaltan la importancia de la participacin activa del alumnado en la evaluacin para
potenciar su capacidad de autorregular su aprendizaje. Ello implica mayor autonoma en la
supervisin, revisin, evaluacin y crtica del propio aprendizaje. Se considera que, a travs
de la participacin del alumnado en la evaluacin se favorece, adems, el pensamiento
reflexivo y crtico (Sambell y McDowell, 1998; Sivan, 2000), el propio conocimiento (Gibbs,
1981), la capacidad de negociacin (Prins y otros, 2005), su confianza (Brew, 2003) y
autosuficiencia (Stefani, 1994).
En el estudio aqu presentado pretendemos dar a conocer cul es la opinin del
alumnado universitario en referencia al uso de estrategias participativas de evaluacin en una
asignatura de segundo curso de grado. Las preguntas de investigacin que nos han guiado
son: Qu opina el alumnado sobre el uso de estrategias participativas en la asignatura
Fundamentos de Direccin? Cules son los aprendizajes percibidos de la autoevaluacin y
evaluacin entre iguales en la asignatura? Cules consideran qu han sido las limitaciones
del uso de dichas estrategias? Se sienten satisfechos con el uso de las mismas?
Mtodo
Se ha seguido la metodologa no experimental, concretamente se ha desarrollado un
estudio descriptivo siguiendo el diseo de encuesta a travs de cuestionario.
Muestra
La muestra est formada por un total de 154 estudiantes de segundo curso del Grado
de Administracin y Direccin de empresas. Los estudiantes estaban divididos en dos grupos
de aproximadamente 80 alumnos cada uno y se encontraban desarrollando la asignatura
Fundamentos de Direccin durante el primer semestre del curso 2011-2012.
Proceso
En un primer momento se dise en la asignatura mencionada una evaluacin
participativa, en la que el alumnado participara a travs de la autoevaluacin de sus propias
tareas y tambin la evaluacin entre iguales. En concreto el alumnado autoevalu el trabajo en
equipo y la exposicin del proyecto. Del mismo modo, se realiz una evaluacin entre
iguales inter-grupo para valorar la exposicin oral de los proyectos realizados por los
compaeros. El servicio web EvalCOMIX fue utilizado para realizar las evaluaciones on-line.
978-84-695-8363-0
830
Instrumentacin
Se dise un cuestionario con el objetivo de conocer la satisfaccin del alumnado con
respecto a la evaluacin participativa desarrollada. El cuestionario est formado por 10
preguntas (Ver Tabla 1): 4 preguntas tipo Likert, 1 pregunta dicotmica y 4 preguntas
abiertas. En las preguntas tipo Likert el alumnado tena que contestar en un rango del 1 al 3
(siendo 1 nada y 3 mucho).
Anlisis de datos
Se ha realizado un anlisis descriptivo y de frecuencias para las preguntas tipo Likert y
la dicotmica. Las preguntas abiertas se han analizado cualitativamente siguiendo el proceso
de anlisis de contenido y textual de Rodrguez Gmez y Gmez Ruiz (2010).
Tabla 1
tems del cuestionario
Preguntas
tipo Likert
Pregunta
dicotmica
Preguntas
abiertas
Resultados
Satisfaccin del alumnado en referencia a la experiencia participativa
El alumnado se mostr satisfecho en relacin a la experiencia recibida. El 90,3% la
consider como una experiencia positiva, tan slo el 9,7% de ellos manifest lo contrario. En
referencia a la satisfaccin en cuanto a la autoevaluacin y evaluacin entre iguales, como
puede verse en las figuras 1 y 2, en general, el alumnado ha considerado como muy positiva
la posibilidad de evaluar su propio trabajo a travs de las diferentes tareas diseadas, el 55,6%
de ellos manifiesta que le ha gustado mucho, tan slo el 0,7 expresa que no le ha gustado nada
autoevaluar su trabajo. Por otra parte, la evaluacin entre iguales ha obtenido puntuaciones
menores, en dicho caso, la mayora del alumnado (57,1%) manifiesta que les ha gustado algo
evaluar a sus compaeros, siendo solamente el 35,7% los que expresan que les ha gustado
mucho evaluar el trabajo de sus compaeros.
978-84-695-8363-0
831
Figura 2. Resultados sobre la opinin del alumnado en referencia a la evaluacin entre iguales
978-84-695-8363-0
832
Tabla 2
Categorizacin de la pregunta Qu crees que has aprendido mediante la autoevaluacin y la
evaluacin de tus compaeros/as? (N=141)
Categoras
Aprender de los errores (identificar y modificarlos)
Capacidad crtica
Atencin (al detalle) y escucha activa
Valorar/evaluar el propio trabajo y el ajeno
Ser objetivo/a
Capacidad de expresin y presentaciones orales
Complicacin del trabajo de evaluacin/entender mejor al
docente
Aprender de los compaeros y/o opiniones de los dems
No pertinentes a la pregunta
No mucho o poco
Afianzar conceptos explicados en clase
Aceptar crticas
Si
Falta de objetividad en la evaluacin de los compaeros
Autoexigencia
Motivacin
Reflexin
Importancia de que todos los evaluadores y miembros del
grupo conozcan bien la materia
Responsabilidad
Realizar crticas constructivas
Desarrollar capacidad de anlisis
Adquirir conocimientos nuevos
f
43
28
17
16
14
11
7
6
6
5
4
4
3
2
2
2
2
2
2
1
1
1
Por ltimo destacar tambin que se han considerado como aprendizaje la propia
mejora de exposiciones orales as como la expresin oral. Tambin se menciona que la
evaluacin entre iguales y la autoevaluacin ha favorecido a una mayor integracin de los
contenidos explicados en clase.
Muchos casos reales, sobre empresas reales, que aplicar a la teora vista durante el
curso, lo que me ha ayudado a afianzar los conceptos explicados. (Estudiante 50)
No faltan tampoco crticas a dichas estrategias, 4 alumnos comentan que consideran que
no han aprendido nada o poco con el uso de dichas estrategias evaluativas, a su vez, otros dos
alumnos comentan que lo que han aprendido ha sido que los compaeros no son objetivos a la
hora de realizar su trabajo. Aspecto, que contrasta con 14 alumnos y alumnas, que expresan
que a travs de dichas estrategias han aprendido a ser ms objetivos.
978-84-695-8363-0
833
F
43
21
13
13
9
8
6
5
5
4
4
3
3
1
1
978-84-695-8363-0
834
Del mismo modo, ha quedado reflejado en el cuestionario el ambiente tenso que haba
en el aula, como comentan diferentes estudiantes:
El posible anti-compaerismo, las "malas" relaciones entre los individuos pueden
alterar los resultados (Para mal) si no se es objetivo.
La falta de atencin de los
compaeros que no estn exponiendo. (Estudiante 144)
Experiencia positiva
An con las limitaciones e inconvenientes percibidos por el alumnado participante, un
90,36% de ellos considera que ha sido una experiencia positiva, siendo el 9,74% quienes
consideran que no lo ha sido.
Discusin
A travs del anlisis cualitativo de los datos y contenidos hemos podido observar que
son muchos los aprendizajes percibidos que se derivan de la participacin en la evaluacin a
travs de estrategias como la autoevaluacin y la evaluacin entre iguales, entre ellos los
estudiantes manifiestan que han desarrollado su la capacidad crtica, aprender a ser objetivo y
a valorar el propio trabajo. En el estudio se puede apreciar tambin la opinin del alumnado
respecto las limitaciones y dificultades que este tipo de evaluacin puede entraar. Estas
respuestas y opiniones no deben ser obviadas, pues transmiten informacin muy importante
para que dichas estrategias participativas aporten aspectos positivos con los que ir avanzando.
Entre las limitaciones detectadas resalta la desconfianza de gran parte del alumnado
respecto las evaluaciones de los compaeros, siendo muchos los que manifiestan que puede
que los compaeros no hayan sido objetivos o hayan valorado en funcin de la afinidad con la
actuacin del estudiante a evaluar. Del mismo modo, destaca la desconfianza en la fiabilidad
de las evaluaciones realizadas y el tiempo extra que implica realizar autoevaluacin y
evaluacin entre iguales. Ha habido tambin algunas sugerencias de mejora en cuanto a la
planificacin de la actividad, proponiendo cambios en la duracin de la misma, as como en el
instrumento de evaluacin utilizado, entre otros. La participacin del alumnado en la
evaluacin en una tarea puntual de la asignatura junto a la falta de formacin del alumnado en
978-84-695-8363-0
835
su rol como evaluadores y un ambiente de clase disruptivo, en el que existe una alta
competitividad y falta de confianza entre el alumnado pueden haber sido las causas que han
propiciado que el alumnado se sintiera receloso ante la evaluacin participativa.
A la hora de llevar a cabo experiencias participativas de evaluacin es necesario
considerar el tiempo extra que este tipo de actividades implica para el alumnado Para que su
uso tenga un impacto positivo en el alumnado es importante tambin entrenarlos como
evaluadores (Gil y Padilla, 2009; Sadler, 2010). Ello requiere que se trate de estrategias
planificadas, no puntuales. Para poder aprovechar al mximo los beneficios que la evaluacin
participativa promueve, es sustancial valorar el contexto en el que nos encontramos: el clima
del aula, la relacin entre el alumnado y sobretodo el nivel de confianza entre ellos. Como
sugiere Carless (2012) la confianza es un aspecto esencial para que las evaluaciones o
revisiones entre iguales tengan efectos positivos, pues si no se confa en que los compaeros
nos valorarn bien, entonces se va a desechar su evaluacin y por tanto habr sido un ejercicio
en balde. Todos estos aspectos son de gran importancia si queremos llevar a cabo estrategias
participativas de calidad, que influyan y aporten para el aprendizaje del alumnado.
Referencias
Boud, D. y Molloy, E. (2012). Feedback in higher and professional Education. London:
Routledge.
Brew, A. (2003). La autoevaluacin y la evaluacin por los compaeros. En S. Brown & A.
Glasner (Eds.), Evaluar en la Universidad. Problemas y nuevos enfoques, (pp. 79-189).
Madrid: Narcea.
Carless, D. (2012). Trust and its role in facilitating dialogic feedback. En D. Boud y L.
Molloy (Eds.), Feedback in Higher and Professional Education (pp. 90-103). London:
Routledge.
Ibarra, M.S., Rodrguez, G. y Gmez, M.A. (2012). La evaluacin entre iguales: beneficios y
estrategias para su prctica en la universidad. Revista de Educacin 359, 206-231.
Gil, J. and Padilla, T. (2009). La participacin del alumnado universitario en la evaluacin del
aprendizaje. Educacin XXI, 12, 43-65.
Nicol, D. (2009). Transforming assessment and feedback: enhancing integration and
empowerment in the first year. Mansfield: Enhancement Themes.
Prins, F.J., Sluijmans, M.A., Kirschener, P.A. y Strijbos, J. W. (2005). Formative peer
assessment in a CSCL environment: a case study. Assessment & Evaluation in Higher
Education, 30(4), 417-444.
Rodrguez Gmez, G. y Gmez Ruiz, M.A. (2010). Anlisis de contenido y textual de datos
cualitativos. En S. Nieto Martn (Ed.), Principios, mtodos y tcnicas esenciales para la
investigacin educativa (pp. 447-469). Madrid: Dykinson.
Sadler, D.R. (2010). Beyond feedback: developing student capability in complex appraisal.
Assessment and Evaluation in Higher Education, 35(5), 535550.
978-84-695-8363-0
836
Sambell, K. y McDowell, L. (1998). The construction of the hidden curriculum: messages and
meanings in the assessment of student learning. Assessment and Evaluation in Higher
Education, 23, 391-402.
Sivan, A. (2000). The implementation of peer assessment: an action research approach.
Assessment in Education, 7(2), 193-213.
Stefani, L.A.J. (1994). Peer, self and tutor assessment: relative reliabilities. Assessment and
Evaluation in Higher Education, 19(1), 69-75.
978-84-695-8363-0
837
Resumen
El objetivo de este trabajo es conocer el impacto de las redes sociales online en el bienestar
subjetivo y emocional de las mujeres de zonas rurales. La muestra est compuesta por 478
mujeres (seleccionadas por cuotas, considerando estratos de edad y nivel educativo, en los
municipios de las zonas rurales de la provincia de Sevilla). Los resultados muestran un
bienestar subjetivo de las mujeres de zonas rurales de medio a medio alto en las redes
sociales. Y un impacto medio-alto de las redes en su bienestar emocional. Las mujeres que
usan las redes sociales tienen emociones que se alejan de estados de ansiedad, tristeza y
desmotivacin. Se obtienen diferencias significativas en el bienestar subjetivo y emocional de
las mujeres en funcin a la edad, la situacin laboral y los estudios realizados. Estos
resultados permiten plantear propuestas educativas para la e-inclusin de las mujeres de
zonas rurales.
Descriptores: E-inclusin, bienestar subjetivo, bienestar emocional, redes sociales online,
estudios de las mujeres, ruralidad.
Abstract
The aim of this paper is to know the impact of the online social networks in the subjective and
emotional well-being of the women of rural zones. The sample is composed by 478 women
(selected by quotas, considering strata of age and educational level, in the municipalities of
the rural zones of the province of Seville). The results show a subjective well-being of the
women of rural zones of way to high way in the social networks. And an impact way - high
place of the social networks in his emotional well-being. The women who use the social
networks have emotions that move away from conditions of anxiety, sadness and disinterest.
Significant differences are obtained in the subjective and emotional well-being of the women
in function to the age, the labor situation and the realized studies. These results offer
educational purposes for e-inclusion of the women of rural zones.
Keywords: E-inclusion, subjective well-being, emotional well-being, online social networks,
womens studies.
Introduccin
Este trabajo se desarrolla en el marco de un proyecto de excelencia financiado por la
Junta de Andaluca y titulado Calidad relacional, inmersin digital y bienestar social desde
978-84-695-8363-0
838
una perspectiva de gnero. Una aplicacin de las redes sociales online en la mujer rural
andaluza. Hoy el avance de las nuevas tecnologas de la comunicacin con el desarrollo de
las redes sociales online, est cambiando las formas de comunicacin y creando nuevos
espacios de relacin social en los que las mujeres no pueden quedar excluidas, no solo por
razones de equidad sino tambin por la repercusin en el bienestar econmico, social y
personal (Castao, Martn y Vzquez, 2008). Pero la incorporacin de las mujeres a las
tecnologas ha estado marcada, tradicionalmente, por la tecnofobia (Sabanes, 2004, Castao,
2009, Menndez, 2012) es decir, por la creencia de que las mujeres tienen emociones
negativas de ansiedad y miedo a la tecnologas, especialmente, las mujeres mayores (Del
Prete, Gisbert y Camacho, 2012). Los modelos educativos de nios y nias en la familia y en
la escuela y las formas de socializacin diferenciadas, generan distintas experiencias de
aprendizaje, en su relacin con las tecnologas. Se considera as que, los nios adoran los
ordenadores y los videojuegos y por tanto, se sienten cmodos (emocionalmente) con ellos,
mientras que en relacin a las nias se genera una visin ms sufrida de las tecnologas al
utilizarlas para resolver problemas ms que para jugar (Castao, 2009: 223). La relevancia
de la investigacin sobre el bienestar subjetivo y emocional de las mujeres en las redes
sociales recae principalmente en su contribucin al planteamiento de polticas educativas
acordes con el desarrollo de modelos educativos que permitan la inclusin digital efectiva de
las mujeres en las tecnologas. Aunque este es un tema escasamente abordado en la literatura
cientfica. Algunos estudios muy recientes ponen de manifiesto el inters por explorar el
bienestar subjetivo en las redes sociales online. Bollen, Gonalves, Ruan y Mao (2011)
indagan en los acontecimientos y sentimientos que las personas experimentan en las redes
mostrando cmo se hacen extensivos a los comportamientos de las personas en su vida real,
es decir, las vivencias en las redes se trasladan a otros contextos vitales. Este tipo de
investigaciones tienen relevancia por las derivaciones educativas que supone conocer el papel
de las emociones en las redes sociales online.
El significado del bienestar subjetivo est relacionado con la percepcin y sensacin
de sentirse bien y con la felicidad. Diener (2009, 2000), considera que el bienestar
subjetivo puede caracterizarse por: su carcter subjetivo, al depender de la propia experiencia
de la persona; su dimensin global, porque incluye la valoracin de la persona en todas las
reas de su vida; y la apreciacin positiva, ya que su naturaleza va ms all de la mera
ausencia de factores emocionales negativos. El bienestar es una vivencia personal, una
condicin humana. Es entendido como un estado psicolgico y emocional fruto de una
reflexin personal, resultado de las conclusiones cognoscitivas y afectivas que las personas
elaboran respecto a su grado de satisfaccin con la vida. Est en funcin de lo que piensan y
sienten al evaluar globalmente su existencia (Cuadra y Florenzano, 2003).
Para los propsitos de este estudio asumimos una perspectiva del bienestar subjetivo
integradora de dos grandes perspectivas tericas: a) la teora de la evaluacin (Diener, 2009;
Diener Scollon y Lucas, 2009) que explica el bienestar subjetivo como una realidad
compuesta por dos componentes, uno cognitivo (la satisfaccin con la vida), y el otro de
naturaleza afectiva (balance afectivo). Y, b) el modelo multidimensional de Carol Ryff
(1989), que se vincula al desarrollo del potencial humano (incluyendo en el estudio del
bienestar dimensiones como autonoma, relaciones positivas dominio del entorno, propsito
en la vida, crecimiento personal y autoaceptacin). Teniendo en cuenta estas consideraciones
en este estudio nos interesa conocer los estados emocionales de las mujeres en las redes
sociales online y el impacto de estas en su bienestar subjetivo. Concretamente pretendemos:
a) Estudiar el bienestar subjetivo que las redes sociales online aportan a las mujeres de zonas
rurales, b) Conocer el bienestar emocional de las mujeres de zonas rurales en las redes
978-84-695-8363-0
839
978-84-695-8363-0
840
Resultados
Bienestar subjetivo de las mujeres de zonas rurales en las redes sociales online
Las respuestas de las mujeres encuestadas, alcanzan en bienestar subjetivo global, una
media de 37,08 (sobre 72) (Desv. T.=13,333). Con estos datos, podemos afirmar que, las
mujeres de zonas rurales, tienen un bienestar subjetivo medio en las redes sociales online. El
diagrama de barras (Figura 1) muestra el aumento de la frecuencia de puntuaciones en la zona
central de la distribucin.
Tabla 1
Bienestar subjetivo (0 80)
N
Vlidos
Perdidos
Media
Mediana
Moda
Desv. tp.
Mnimo
Mximo
464
14
37,08
37,00
35
13,333
0
72
La satisfaccin de las mujeres con las redes sociales, por la repercusin que han tenido
en sus vidas, se observa en cuestiones relacionadas con la mejora de las condiciones de vida o
el logro de deseos y proyectos personales. En definitiva, implica entender las redes como una
va de logros personales. Resulta llamativo en el estudio que esta dimensin en la que tiene la
puntuacin media de valor ms bajo 5.82 (sobre 20).
Bienestar emocional de las mujeres en las redes sociales.
En relacin al bienestar emocional, se puede observar en la Tabla 3 que la mediana es
de 19,5 (sobre 30) por lo que hay una tendencia por parte de las mujeres a manifestar
emociones positivas cuando usan las redes sociales.
978-84-695-8363-0
841
Tabla 3
Bienestar emocional (0 30)
N
Vlidos
Perdidos
440
38
19,84
19,50
15
4,162
2
30
Media
Mediana
Moda
Desv. tp.
Mnimo
Mximo
2,251
4
435
,063
978-84-695-8363-0
842
Los resultados del anlisis ANOVA, permiten afirmar que existen diferencias
significativas en el bienestar subjetivo global de las mujeres en funcin a los estudios
realizados (F de Snedecor=2,559, p= .006). la aplicacin de la prueba de contraste muestra
que, se dan diferencias significativas entre todos los grupos considerados, excepto entre el
grupo de mujeres con estudios de Formacin Profesional y el grupo de mujeres con estudios
de Bachillerato. Esto muestra la delimitacin de las diferencias en el bienestar emocional de
las mujeres en funcin a las grandes etapas educativas: enseanza bsica, enseanzas medias
y enseanzas universitarias.
Tabla 5
ANOVA
Bienestar Subjetivo
(0-80)
Inter-grupos
Intra-grupos
Suma de cuadrados
2516,584
75180,507
gl
4
435
Media cuadrtica
629,146
172,829
F
3,640
,006
Tabla 6
Igualdad de medias BS (0-80)
Estadstico
Welch
Brown-Forsythe
gl1
3,295
3,344
gl2
4
4
Sig.
160,642
293,327
,013
,011
978-84-695-8363-0
843
Tabla 8
Contraste no paramtrico. Bienestar emocional por estudios realizados
Estudios realiz.
N
Rango de media
Suma de rangos
Sin estudios
Universidad
55
177
144,72
107,73
7959,50
19068,50
Bienestar emocional por estudios realizados
(sin estudios/Universidad)
U de Mann Withney
Wilcoxon W
Z
Sig. Asint.
total
232
3315,500
19068,500
-3,579
,000
978-84-695-8363-0
844
En relacin a la situacin laboral, no parece que las amas de casa sean menos felices
que las que tienen trabajos asalariados (Wright, 2002). En este mismo sentido, hemos podido
observar que las mujeres amas de casa poseen puntuaciones en bienestar emocional ms altas
en las redes sociales que el grupo de mujeres que poseen un trabajo remunerado.
Concluimos que: a) las mujeres de zonas rurales tienen un bienestar subjetivo de
medio a medio alto en las redes sociales online mostrando que, es una actividad satisfactoria
para ellas y que les puede permitir mejorar su inclusin digital y su participacin como
ciudadanas activas, b) Las redes sociales tienen un impacto emocional positivo en las mujeres
de zonas rurales. Emociones que se alejan de estados de ansiedad, tristeza y desmotivacin,
por lo que constituyen un aporte importante en sus vidas. Adems este hallazgo cuestiona la
existencia de resistencias emocionales a las tecnologas por parte de las mujeres como una de
las principales barreras (tecnofobia) que impactan en la brecha digital de gnero, c) Las redes
sociales no son percibidas por las mujeres como una va importante de logro personal, aspecto
que ha de ser tenido en cuenta para el desarrollo de modelos educativos que redunden en una
percepcin positiva de las redes sociales como herramientas de mejora de la calidad de vida
para las mujeres y d) Las mujeres que presentan un menor bienestar subjetivo en las redes son
las mujeres con estudios universitarios. En cuanto al bienestar emocional, las mujeres sin
estudios, las ms mayores, as como las mujeres desempleadas y las mujeres amas de casa
presentan niveles ms positivos de bienestar emocional en las redes. Podramos decir, que son
los grupos de mujeres ms felices en las redes.
Los hallazgos permiten hacer propuestas educativas, para la orientacin educativa y
profesional que estimulen nuevos usos de las redes sociales existentes ms acordes con las
necesidades y demandas de las mujeres. Tambin desde el punto de vista tecnolgico la
proliferacin de nuevas redes sociales online que redunden en el aumento del bienestar
subjetivo y emocional de las mujeres resulta un acicate de especial valor social y estratgico
para la e-inclusin y la ciudadana digital activa.
Referencias
Bollen, J. Gonalves, B., Ruan, G. y Mao, H. (2011). Happiness is assortative in online social
networks. Artificial Life, 17(3), 237-51.
Castao C. (2009). La segunda brecha digital y las mujeres jvenes. Quaderns de la
Mediterrnia, 11, 218-224.
Castao, C., Martn, J. y Vzquez, S. (2008). La e-inclusin y el bienestar social: una
perspectiva de gnero. Economa Industrial, 367, 139-152.
Cuadra, H. y Florenzano, R. (2003). El bienestar subjetivo: hacia una psicologa positiva.
Revista de Psicologa de la Universidad de Chile, 12(1), 83-96.
Del Prete, A. Gisbert, M.G. y Camacho, M. (en prensa). Las TIC como herramienta de
empoderamiento para el colectivo de mujeres mayores. El caso de la comarca del
Montsi. Pxel-Bit. Revista de Medios y Educacin (Catalua).
Diener, E. (2009). Assesing well-being: progress and opportunities. En E. Diener (Ed.),
Assessing well-being. The collected works of Ed Diener (pp. 25-65). Nueva York:
Springer.
978-84-695-8363-0
845
Diener, E. (2000). Subjective wellbeing: the science of happiness and a proposal for a
national index. American Psychologist, 55, 34-43.
Diener, E. y Suh, E. (1998). Age and subjective well-being: an international analysis. Annual
Review of Gerontology and Geriatrics, 17, 24-41.
Diener, E., Scollon, C. N. y Lucas, R. E. (2009). The evolving concept of subjective wellbeing: the multifaceted nature of happiness. En E. Diener (Ed.), Assessing well-being.
The collected works of Ed Diener (pp. 67-100). Nueva York: Springer.
Glenn, N.D. y Weaver, C. N. (1981). The contribution of marital happiness to global
happiness. Journal of Marriage and the Family, 43(2), 161-168.
Herzog, A. R. y Rodgers, W. L. (1981). Age and satisfaction: data from several large surveys
Journal of Gerontology, 33, 109-125.
Menndez, M. I. (2012). Usos y consumos de las mujeres. Cultura digital genrica. Telos:
Cuadernos de comunicacin e innovacin, 91, 45-53.
Michalos, A.C. (1985). Multiple discrepancies theory (MDT). Social Indicators Research,
16(4), 347-414.
Ryff, C. D. (1989b). Happiness is everything, or is it? Explorations on the meaning of
psychological wellbeing. Journal of Personality and Social Psychology, 57, 1069
1081.
Sabanes, D. (2004). Mujeres y nuevas TIC. Disponible en:
http://www.inmujer.gob.es/areasTematicas/estudios/serieEstudios/docs/mujeresNueva
sTecnologias.pdf
Veenhoven, R. (1994). El estudio de la satisfaccin con la vida. Intervencin Psicosocial,
3(9), 87-116.
Wright, E. O. (2002). Clases. Madrid: Siglo veintiuno.
978-84-695-8363-0
846
Resumen
La progresiva implantacin de sistemas de gestin de la calidad en los centros educativos ha
caracterizado el momento actual, aunque transcurridos unos aos se hace necesario valorar
el impacto de la eficacia de implantacin de los mismos. Una de las dimensiones clave de un
sistema de gestin de la calidad es el sistema de gestin del centro, en la que se contempla la
cultura de planificacin. Para evaluar esta dimensin se ha desarrollado una investigacin
cuyo diseo es no experimental de carcter exploratorio, estudio ex-post-facto, y en la que
han participado 29 centros educativos, pblicos, concertados y privados ubicados en las
comunidades de Castilla y Len (CCyL) y de Madrid (CM), en los que se estn
desarrollando, al menos, durante tres aos. Los resultados obtenidos muestran un grado de
mejora en las acciones encaminadas a la organizacin y estructuracin de las actividades
que desarrollan referidas a aspectos acadmicos y de gestin.
Descriptores: Evaluacin de Programas, implantacin, sistema de gestin de la calidad,
impacto, cultura de planificacin.
Abstract
The progressive implementation of quality control systems in educational centers is a
characteristic of modern day Education, although after some years pass it is necessary to
evaluate the impact and efficacy of these systems. One of the key elements of a quality control
system is the management system of a center, in which a planning culture can be appreciated.
In order to evaluate this element research has been undertaken which is non-experimental in
nature, ex-post-facto studies, in which some 29 centers have participated, including public,
private and semi-private centers located in the regions of Castilla-Len and Madrid, during
at least three years. The results obtained show a degree of improvement in those actions
aimed at organization and structure of activities undertaken which refer to academic aspects
and aspects of management.
Keywords: Program Evaluation, implementation, quality management system, impact,
planning culture.
978-84-695-8363-0
847
Introduccin
Ofrecer una educacin de calidad ha sido siempre objetivo fundamental de las
instituciones educativas y ms an en los ltimos aos, aunque su significado ha ido
evolucionando. Si analizamos los estndares o modelos de calidad ms utilizados, tanto en
Espaa como en Europa, y que se han implantado en los centros educativos, encontramos los
basados en la norma de la Internacional Organization for Standarization (ISO) y en el
modelo de la Fundacin Europea para la Gestin de la Calidad (EFQM).
El Modelo EFQM se basa en la premisa de que los procesos son la va por medio de la
cual las organizaciones han de encauzar y liberar las aptitudes de su personal, con el fin de
producir ciertos resultados. El segundo criterio de este modelo, poltica y estrategia, es clave
para toda organizacin educativa al hacer referencia a la misin, visin, valores y direccin
estratgica del centro, as como a la forma en que stos se implantan en los proyectos
institucionales. Este criterio ha de reflejar cmo se asume el concepto de gestin de calidad en
la planificacin y la estrategia del centro educativo y cmo los principios de la gestin de
calidad se utilizan en la formulacin, revisin y mejora de la estrategia y la planificacin.
En la planificacin del centro educativo es necesario definir nuestra cultura o
identidad. Revisando la normativa en educacin de los ltimos aos, observamos que,
concretamente en la Ley Orgnica General del Sistema Educativo (LOGSE) y en la Ley
Orgnica de la Participacin, la Evaluacin y el Gobierno de los Centros Docentes
(LOPEGCE) se reconoce la autonoma que se concede a los centros educativos en la
elaboracin de proyectos educativos propios acordes con la singularidad de los mismos. De
esta manera, la planificacin adquiere un nuevo carcter, mucho ms participativo y
responsable.
Los tres documentos principales del centro (Proyecto Educativo de Centro PEC-,
Proyecto Curricular de Centro PCC- y Reglamento de Organizacin y Funcionamiento ROF-) que establecen la planificacin a medio plazo, se concretan y revisan en el Plan Anual
de Centro y en la Memoria de final de curso, que son los documentos que establecen la
planificacin a corto plazo. La Ley Orgnica de Educacin (LOE), en el Cap. II .2, referido a
la Autonoma de los Centros, indica: Los centros docentes dispondrn de autonoma para
elaborar, aprobar y ejecutar un proyecto educativo y un proyecto de gestin, as como las
normas de organizacin y funcionamiento del centro. Segn esta ley, los documentos de
planificacin del centro son el Proyecto Educativo de Centro, el Proyecto de Gestin, las
Normas de Organizacin y Funcionamiento y la Programacin General Anual. Al ser un
proceso dinmico, la planificacin est sujeta a un continuo reajuste y revisin de lo
planificado para adaptarlo constantemente a las circunstancias, as como a un proceso de
evaluacin de sus resultados, generando procesos de aprendizaje en la organizacin.
La calidad surge en el mbito empresarial y, poco a poco, el sistema de gestin que
conlleva se ha ido implantando en los centros educativos con el fin de mejorar su
funcionamiento, sus procesos y, fundamentalmente, sus resultados. Transcurridos unos aos
de su implantacin se hace necesario valorar el impacto de la eficacia de los mismos,
analizando los factores vinculados al xito de estos planes para aportar sugerencias y
propuestas que optimicen su implantacin. Una de las dimensiones clave de un sistema de
gestin de la calidad es el sistema de gestin del centro, en la que se contempla la cultura de
planificacin. Se entiende por impacto el conjunto de cambios observados eficientes control
y optimizacin de recursos- consolidados que han afectado positivamente en el trabajo o
978-84-695-8363-0
848
978-84-695-8363-0
849
alumnos. Cuevas, Daz e Hidalgo (2008), clasifican los tamaos de plantilla en: pequeas
(menos de 30 docentes), medianas (entre 30 y 50 docentes) y grandes (ms de 50 profesores).
En nuestra muestra el 16,7% de los centros presenta plantillas pequeas, el 25,9% a plantillas
medianas y el 57,4% a plantillas grandes. Atendiendo al nmero de alumnos, Lee, Smerdon,
Alfeld-Liro y Brown (2000) clasifican los centros en: pequeos (menos de 500 alumnos),
medianos (entre 500 y 1.000 alumnos) y grandes (ms de 1.000 alumnos). El 27,4% de los
centros de nuestra muestra fueron pequeos, el 36,3% medianos y el 36,3% grandes.
Para medir el impacto que los SGC haban podido tener en la dimensin del sistema de
planificacin del centro, en el estudio se elabor un instrumento ad hoc, que contemplaba
diferentes dimensiones, utilizando, en este caso, las referidas al sistema de gestin y cultura
de planificacin del centro. Se evalu el nivel de impacto que los SGC haban podido tener en
el sistema de planificacin del centro de las actividades y procesos (actividades acadmicas,
procesos de enseanza-aprendizaje, reuniones del profesorado, las tutoras, relaciones con los
padres y las actividades complementarias); la utilidad y frecuencias de las diferentes tipos de
reuniones; el nivel de uso, utilidad y periodicidad de los distintos tipos de documentacin de
planificacin del centro (Proyecto Curricular, Programacin General Anual, Planificacin
Estratgica, Proyecto Educativo); la gestin de los tiempos de las actividades del centro (slo
para directivos); y la revisin y evaluacin de la direccin del centro (slo para directivos).
De este modo, el cuestionario qued configurado por un total de 24 tems para el de
profesores y de 30 para el de los miembros del equipo directivo, que respondieron atendiendo
a una escala de 1 a 5 de tipo Likert (donde 1 indicaba un impacto muy bajo, y 5 un impacto
muy alto).
Por otro lado, y con el fin de poder llevar a cabo estudios diferenciales, el director del
centro cumpliment, adems, un cuestionario con variables referidas a caractersticas del
centro y del SGC implantado, tales como: tipo de centro (privado, pblico, concertado),
nmero total de profesores en el centro, nmero de alumnos y nmero de aos que llevaba
implantado el SGC en el centro. La aplicacin del cuestionario a los profesores y miembros
del equipo directivo se llev a cabo durante el primer bimestre de 2012.
El tratamiento estadstico de los datos se realiz con el paquete informtico SPSS 20,
llevando a cabo, por un lado, un anlisis de fiabilidad del instrumento (alpha de Cronbach) y,
por otro, un estudio descriptivo de las respuestas del instrumento. De igual modo, estos
anlisis fueron complementados con estudios diferenciales de cada uno de los tems
(aplicando ANOVA y t student) en funcin de distintas caractersticas de los centros, tales
como: tipo de centro, Comunidad Autnoma, nmero de aos que lleva implantado el SGC,
puesto (profesor, miembro del equipo directivo), tamao de la plantilla de profesores
(pequea, mediana y grande) y nmero de alumnos en el centro (pequeo, mediano y grande).
Resultados
Anlisis de fiabilidad
Los anlisis realizados mostraron un nivel de fiabilidad excelente para el conjunto de
los 30 elementos ( = 0,936) y con ndices de homogeneidad no inferiores a 0,3 y
mayoritariamente en torno a 0,6 (mximo IH = 0,686).
978-84-695-8363-0
850
978-84-695-8363-0
851
978-84-695-8363-0
852
978-84-695-8363-0
853
Esta valoracin fue algo ms alta en los centros concertados que en los pblicos, no siendo
muy importante esta diferencia (4 dcimas).
Interesados en conocer qu aspectos podan haber influido ms en esta apreciacin
favorable se decidi realizar un anlisis de regresin con todos los tems del cuestionario
como predictores del grado de impacto en la planificacin atribuido al Sistema de Garanta de
Calidad. Para ello se utiliz el mtodo general de seleccin de predictores (Stepwise) de los
que acabaron siendo seleccionados 6 tems, predicindose casi un 51% (R2 = 0,507, p= 0,000)
de la varianza. La ecuacin resultante fue la siguiente:
Z45 = 0,224 Z37util + 0,220 Z34til + 0,212 Z29til + 0,142 Z27 + 0,127 Z35til + 0,127 Z18
(37Utilidad Mejora de la Utilidad de la evaluacin de las actividades complementarias;
34Utilidad Utilidad de las revisiones de la Planificacin estratgica; 29Utilidad Nivel de
utilidad de la documentacin en la planificacin Programacin General Anual; 27 La
implantacin del Modelo de Calidad ha supuesto llevar a cabo un registro de las
distintas reuniones; 35Utilidad Mejora de la Utilidad del rendimiento acadmico de los
alumnos; 18 Mejoras en el sistema de planificacin de la revisin del proceso de
enseanza aprendizaje)
En dicha ecuacin se puede comprobar cmo en la valoracin del impacto del SGC en
la planificacin de un centro, la mejora atribuida a la utilidad de las revisiones y
documentacin sobre la planificacin general del centro son de las que ms predicen, junto
con la utilidad de las evaluaciones de las actividades complementarias, lo cual est en
consonancia con lo que solan comentar los directores de los centros sobre el aumento en el
uso de los informes y documentaciones generadas por el SGC. En menor medida, la utilidad
atribuida a los rendimientos acadmicos de los alumnos, la mejor planificacin de la revisin
de los procesos de enseanza-aprendizaje y el registro de todas las reuniones que se
realizaban en el centro, muy propio de una cultura de planificacin basada en sistemas de
calidad.
Conclusiones
Los resultados de la valoracin del impacto de la implantacin de un SGC,
transcurridos varios aos, nos permiten afirmar que en el mbito de la planificacin los
resultados han sido, en trminos generales, positivos.
En su mayora, los centros consultados consideraron que la implantacin del SGC ha
supuesto el establecimiento de un nuevo modelo de planificacin del centro en la forma de
organizar y planificar todas las actividades, influencia que es ms destacada por los profesores
de los centros Concertados y Pblicos, por los centros Pequeos y Medianos, y por los que
llevan ms tiempo implantndolo. Respecto a la planificacin de las actividades y procesos
habituales del centro, no parece que las mejoras hayan sido muy relevantes, destacando una
influencia de tipo medio. Por lo general, la opinin de los miembros del equipo directivo es
bastante ms positiva que la de los profesores.
Con relacin al trabajo en equipo, los profesores se muestran satisfechos con la
frecuencia y utilidad de las diferentes tipos de reuniones de coordinacin entre los diferentes
estamentos del centro, pero consideran algo escasas las desarrolladas por el Departamento de
Orientacin. El SGC ha introducido mejoras en el registro y seguimiento de este tipo de
978-84-695-8363-0
854
reuniones, aunque consideran que la burocracia existente puede ser mejorable. El uso y
utilidad de los diferentes documentos de organizacin del centro tambin se ha incrementado.
Esta mejora la destacan nuevamente ms los Equipos directivos que los Profesores y en los
centros que llevan menos tiempo de implantacin, existiendo tambin algunas diferencias
entre las CCyL y CM a favor de la CCyL.
Los directivos consideran que el SGC les ha permitido mejorar bastante la gestin de
todas sus actividades. Este impacto lo reconocen ms los centros Concertados que los
Privados y los que estn ubicados en la CCyL. Respecto a la revisin del Proyecto de
Direccin, slo un 13% no lleg a considerarlo de utilidad.
Por lo tanto, los centros consultados consideran que el impacto del SGC en la
planificacin de un centro ha supuesto una mejora en la utilidad de las revisiones y
documentacin sobre la planificacin general del centro, as como en la utilidad de las
evaluaciones de las actividades complementarias.
Referencias
Bae, S. (2007). The relationship between ISO 9000 participation and educational outcomes of
schools. Quality Assurance in Education, 15(3), 251-270.
Cuevas, M., Daz F. e Hidalgo, V. (2008). The headmasters leadership and the quality of
education. A research on their characteristics in a multicultural context. Revista de
currculum y formacin del profesorado, 12(2), .
Gonzlez Lpez, I. (2004). Modelos de evaluacin de la calidad orientados a la mejora de las
instituciones educativas, XXI: Revista de Educacin, 6, 155-169.
Lee, V. E., Smerdon, B. A., Alfeld-Liro, C. y Brown S. L. (2000). Inside small and large high
schools: curriculum and social relations. Educational Evaluation and Policy Analysis,
22(2), 147171.
Lpez, P. (2010). Factores de calidad educativa, Estudios Pedaggicos, XXXVI(1), 147-158.
978-84-695-8363-0
855
Resumen
Con este trabajo queremos conocer el grado y tipo de apoyo social que perciben las mujeres
dentro de las redes sociales online. Para ello, realizamos un estudio descriptivo basado en
encuesta a 478 mujeres de entornos rurales de Andaluca con edades comprendidas entre 18
y 65 aos. Se disea y aplica una escala compuesta por 12 tems que mide el apoyo social
percibido en las redes sociales, siendo sta una medida vlida y fiable. Los resultados
muestran un grado de apoyo suficiente ( = 24.11; DT. = 11.887), siendo el apoyo relacional
el que ms perciben y el emocional el que menos. Los aspectos en los que menos apoyo social
perciben las mujeres en las redes son los relacionados con la identidad y la comunicacin
emocional. Las pruebas de hiptesis demuestran diferencias significativas en funcin de la
edad, el tipo de red, situacin familiar y laboral de las mujeres.
Descriptores: redes sociales; mujer rural; apoyo social percibido; estudios de las mujeres;
brecha generacional.
Abstract
This paper studies the degree and type of social support received by rural women in online
social networks. To do this, we carry out a descriptive study based on survey of 478 women in
rural environments from Andalusia aged 18 and 65. We design and apply a scale composed
by 12 items measuring perceived social support in social networks. This is a valid and
reliable measure. The results show a sufficient degree of support ( = 24.11; SD. = 11.887).
The type of support that women receive more social networks is the relational and the less the
emotional. The identity and emotional communication is in what less support receive.
Hypothesis tests show significant differences depending on the age, type of network, family
and work situation of women.
Keywords: social networks; rural women; perceived social support; women studies;
generation gap.
Introduccin
La web 2.0 con la incorporacin de espacios y recursos que facilitan la interaccin y la
comunicacin virtual ha abierto nuevas posibilidades para la educacin y el aprendizaje, pero
tambin para la exclusin por factores sociales como la edad, la clase social, el gnero, el
nivel educativo o la ubicacin geogrfica. La inclusin digital en estos nuevos entornos de
978-84-695-8363-0
856
978-84-695-8363-0
857
978-84-695-8363-0
858
Media
2,58
2,23
1,97
1,80
Desv. Tp.
1,090
1,213
1,271
1,302
Media
2,34
1,94
1,92
1,79
Desv. Tp.
1,135
1,203
1,216
1,193
978-84-695-8363-0
859
El tipo de apoyo que menos perciben las mujeres de zonas rurales en las redes sociales
online es el apoyo emocional. A pesar de que cuentan en su red social con personas que las
quieren ( = 2,38; DT. = 1,204) y a las que confiarle sus cosas ( = 2,14; DT. = 1,260), no
cuentan con personas a quienes expresar su afecto ( = 1,73; DT. = 1,320) y que les ayude a
explorar nuevas facetas de s mismas ( = 1,34; DT. = 1,215) (ver Tabla 3). Esto muestra
redes sociales online frgiles en el plano emocional para el desarrollo de estas mujeres
(fortalecimiento de su autoestima, identidad personal, etc.).
Tabla 3
Indicadores del apoyo emocional percibido
tem
TEM 3. Cuento con personas que me quieren
TEM 5. Cuento con personas para confiarle mis cosas
TEM 7. Cuento con personas a quienes puedo amar
TEM 12. Cuento con personas que descubren nuevas facetas mas
Media
2,38
2,14
1,73
1,34
Desv. Tp.
1,204
1,260
1,320
1,215
145
48
150
116
21,56
22,44
23,66
,676
28,78
1,000
N
23
190
204
46
2
16,96
22,59
1
22,59
25,73
27,26
978-84-695-8363-0
Sig.
860
,103
,235
Hijos (si-no)
Media
DT.
Sin hijos/as
Con hijos/as
203
250
26,00
22,60
10,684
12,600
978-84-695-8363-0
861
978-84-695-8363-0
862
978-84-695-8363-0
863
Resumen
El objetivo principal de esta investigacin es analizar las ventajas e inconvenientes en el uso
de las tecnologas de la informacin y la comunicacin (TIC) percibidos por los maestros de
Educacin Infantil y Primaria en funcin del sexo y edad. Para ello se administr a 703
docentes de 21 a 65 aos (M = 36,6 aos) un cuestionario elaborado ad hoc que analiza el
uso y la percepcin de las TIC. Los resultados indican que la percepcin de ventajas e
inconvenientes en el uso de las TIC es similar entre hombres y mujeres, si bien las mujeres
valoran significativamente mejor la facilidad de uso de las TIC que los hombres. En cuanto a
la edad, los docentes ms mayores (46-65 aos) en comparacin con docentes de menor edad
(21-30 aos) sealan significativamente menos ventajas y ms inconvenientes en la
utilizacin de las TIC como herramienta para su labor profesional.
Descriptores: Maestros, TIC, diferencias de sexo y edad, innovacin educativa.
Abstract
The main purpose of this research is to analyze the perceived advantages and disadvantages
in the use of information and communication technologies (ICT) by the teachers of pre-school
and primary education as a function of sex and age. To do this a questionnaire developed ad
hoc which analyzes the use and perception of ICTS was administered to 703 teachers from 21
to 65 years (M = 36,6 years). The results show that the perceived advantages and
disadvantages in the use of ICT are similar between men and women, although women valued
significantly better easiness of ICT than men. In terms of age, older teachers (46-65 years)
compared to younger teachers (21-30 years) indicate significantly less advantages and more
disadvantages in the use of ICTS as a tool for their professional work.
Keywords: Teachers, ICT, gender and age differences, educative innovation.
Introduccin
El desarrollo de las Tecnologas de la Informacin y la Comunicacin (TICs) en los
centros educativos es una prioridad de las polticas educativas de los diferentes gobiernos
Europeos. Estas polticas han sido favorecidas y promovidas por la propuesta europea
eEurope que tiene como objetivo el desarrollo de la sociedad de la informacin, y
concretamente, por el programa eLearning, aprobado en el Consejo Europeo de Lisboa del
978-84-695-8363-0
864
ao 2000 por la Unin Europea. En nuestro pas, la ley Orgnica de Educacin (LOE 2006)
introduce en el currculum prescriptivo la competencia bsica del Tratamiento de la
Informacin y Competencia Digital36, siendo obligatorio su aprendizaje a lo largo de la
escolarizacin obligatoria.
Son numerosos los estudios internacionales que han analizado la implementacin e
incorporacin de las TIC en los centros educativos y se ha comprobado el aumento
significativo en la disponibilidad de ordenadores y acceso a internet en los centros escolares,
por parte del profesorado y del alumnado, en los ltimos aos (European Commission, 2006).
Las investigaciones que han analizado la utilizacin de las TIC en las prcticas de
enseanza han mostrado diferentes resultados en las mejoras de la innovacin de la praxis
docente. Balanskat, Blamire y Kefala (2006), realizaron un estudio para la Comisin
Europea37 en el que se analizaron diferentes investigaciones realizadas en los sistemas
educativos europeos, sobre el uso de las TIC y su repercusin en los mtodos de enseanza y
en mejoras del aprendizaje de los alumnos. Estos autores concluyeron que los docentes
utilizan las TIC para apoyar las pedagogas que normalmente despliegan en el aula,
desarrollando la prctica didctica habitual que utilizan cotidianamente.
La introduccin y el uso de las TIC por los docentes no generan una transformacin de
la didctica tradicional en el aula. Tal como seala el profesor Manuel Area Moreira (2008),
diferentes estudios realizados en Espaa ponen de manifiesto que el modelo de enseanza que
comparten mayoritariamente profesores y alumnos utilizando las TICs en el aula es de
carcter expositivo o de transmisin de informacin y que no supone necesariamente una
alteracin o innovacin significativa del modelo de enseanza que utiliza el profesor
habitualmente.
Los estudios realizados en los ltimos aos por Cuban (1986; 2001) ya mostraban que
la introduccin de las TIC en el aula no supona una inmediata innovacin de la tcnicas de
enseanza de los docentes. A este respecto los estudios de Tondeur, Van Braak, y Valcke
(2007) mostraron que hay una gran divergencia entre las lneas de accin del currculum
respecto de las competencias en el tratamiento de la informacin y la comunicacin y las
experiencias que se dan en el aula en el uso de TIC por parte del alumnado y del profesorado.
A este respecto, podemos destacar una serie de investigaciones que muestran como muchos
docentes no han desarrollado una actitud favorable hacia el uso de las TIC como recurso
educativo que favorece la innovacin educativa (Aznar, Fernndez e Hinojo 2003). Para
Ortega y Fuentes (2003) existe una tecnofobia en el colectivo docente que limita el uso y la
aplicacin didctica de las TIC en las aulas, aunque la legislacin desarrolla la competencia
digital como un objetivo prioritario a lograr por todo el alumnado al finalizar la escolarizacin
obligatoria.
36
Esta competencia bsica consiste en disponer de habilidades para buscar, obtener, procesar y comunicar
informacin, y para transformarla en conocimiento. Incorpora diferentes habilidades, que van desde el acceso a
la informacin hasta su transmisin en distintos soportes una vez tratada, incluyendo la utilizacin de las
tecnologas de la informacin y la comunicacin como elemento esencial para informarse, aprender y
comunicarse. El tratamiento de la informacin y la competencia digital implican ser una persona autnoma,
eficaz, responsable, crtica y reflexiva al seleccionar, tratar y utilizar la informacin disponible, contrastndola
cuando es necesario, y respetar las normas de conducta acordadas socialmente para regular el uso de la
informacin y sus fuentes en los distintos soportes.
37
El estudio se realiz para la red European Schoolnet.
978-84-695-8363-0
865
Tal como seala Manuel rea Moreira (2008) la incorporacin y utilizacin de las
tecnologas digitales a las escuelas no genera necesariamente, al menos inicialmente,
innovaciones sustantivas de los mtodos didcticos y de las prcticas docentes. Muchos de los
estudios que han explorado de qu forma se emplean las TIC en el aula evidencian que suelen
estar al servicio de modelos educativos basados en la transmisin de informacin, en el
trabajo individual del alumnado y en la realizacin de actividades reproductivas del
conocimiento.
978-84-695-8363-0
866
Mtodo
Participantes
Los participantes fueron 703 docentes (78,8% mujeres) de educacin infantil y
primaria en centros pblicos o privados de la provincia de Alicante con edades comprendidas
entre los 21 a 65 aos (M = 36.6 aos). El 32,6% de la muestra tiene entre 21 y 30 aos, el
54,2% entre 31 y 45 aos, y el 13,2% entre 46 y 65 aos. Su distribucin por etapa educativa
es: 54.5% trabaja en educacin infantil y el 45.5% trabaja en educacin primaria. La Tabla 1
resume las frecuencias de la muestra por sexo y grupos de edad.
Tabla 1
Distribucin de la muestra de docentes por sexo y grupos de edad
Edad
21-30 aos
31-45 aos
46-65 aos
Total
Sexo
Hombres
39
87
23
149
Total
Mujeres
190
294
70
554
229
381
93
703
Instrumentos
El instrumento utilizado para la investigacin ha sido un cuestionario elaborado ad
hoc que analiza el uso y la percepcin de las TIC que tienen los docentes (Gomis, Delgado,
Gonzlez, Jover, Len y Snchez, 2012). El cuestionario consta de 14 preguntas cerradas de
anlisis cuantitativo que se responden a travs de escalas tipo Likert de 5 puntos (1=nunca,
5=siempre y 1=nada, 5=mucho). Adems el cuestionario tambin recoge la frecuencia de uso
de las TIC (diaria, semanal, quincenal, trimestral) de los docentes en el contexto laboral y
personal.
Procedimiento
El cuestionario se realiz segn el procedimiento de consentimiento informado. Se
inform de cmo responder a la prueba, la participacin era annima, y voluntaria y quedaba
resguardado el derecho a la confidencialidad.
Anlisis de datos
Los datos obtenidos se analizaron con el programa SPSS 16.0, llevando a cabo anlisis
descriptivos y anlisis de varianzas (ANOVA). Para identificar entre qu grupos de edad se
encontraban las diferencias significativas se efectuaron pruebas post hoc (Prueba Scheff).
Para efectuar estos anlisis se utiliz el programa SPSS19.0.
Resultados
Uso de las TIC de los maestros
El anlisis de prevalencias de uso de las TIC en el aula indica que el 10,8% de los
maestros no utilizan las TIC nunca, mientras que el 25,5% las utilizan todos los das, el
40,4% las utilizan semanalmente, el 16.6% las utilizan mensualmente y el 6,7% las utilizan
trimestralmente.
978-84-695-8363-0
867
D.T.
Ventajas
percibidas
M
D.T.
Sexo
Hombres (n = 149)
Mujeres (n = 559)
F
p
17.03
17.39
.447
n.s
5.82
5.91
30.77
31.53
3.102
n.s.
5.44
4.44
El anlisis sobre las valoracin de las distintas caractersticas de las TIC por sexo,
seala que las mujeres valoran significativamente mejor la facilidad de uso de las TIC que los
hombres (F= 4.75, p= .03), si bien el resto de tems no difirieron significativamente por sexo.
Diferencias de percepcin de las TIC por grupos de edad
Los ANOVA indican que la valoracin de las TIC por parte de los maestros es en
trminos generales semejante en los tres grupos de edad (Tabla 3), si bien, la valoracin de
alguna de las caractersticas de las TIC varan significativamente en funcin de la edad de los
maestros (vase Tabla 4).
Tabla 3
Diferencias en las ventajas e inconvenientes percibidas de las TIC por edad
Inconvenientes
percibidos
M
Edad
21-30 aos (n = 229)
31-45 aos (n = 381)
46-65 aos (n = 93)
F
p
16.92
17.72
16.61
2.112
n.s.
D.T.
5.79
5.97
5.70
Ventajas
percibidas
M
31.87
31.26
30.59
2.712
n.s.
D.T.
4.41
4.62
5.41
La valoracin de la falta de preparacin para usar las TIC, el incremento del tiempo de
dedicacin, la escasa disponibilidad de aparatos informticos en el centro, la escasez de
materiales didcticos, la alta motivacin y la variedad de cdigos de informacin son
valoraciones que difieren significativamente segn la edad de los maestros (Tabla 4).
978-84-695-8363-0
868
Tabla 4
Inconvenientes y ventajas percibidas de las TIC segn los grupos de edad
Inconvenientes
Falta de preparacin
Incremento del tiempo de dedicacin
Escasa disponibilidad en el centro
Escasa disponibilidad en los hogares
Poca aceptacin de las familias
Escasez de materiales
Poca adaptacin de los materiales
Ventajas
Interactividad
Individualizacin de la enseanza
Variedad de cdigos
Aprendizaje cooperativo
Aprendizaje autnomo
Alta motivacin
Facilidad de uso
Actualizar la informacin
21-30
aos
M
2.35
2.63
2.93
2.28
2.07
2.54
2.39
3.96
3.81
4.35
3.45
4.10
4.41
3.62
4.14
D.T.
1.17
1.10
1.46
1.18
1.03
1.25
1.10
31-45
aos
M
2.55
2.79
2.96
2.41
2.11
2.68
2.54
1.01
.92
.80
1.10
.86
.72
.84
.86
3.90
3.70
4.20
3.41
4.01
4.32
3.61
4.06
D.T.
1.18
1.10
1.39
1.11
1.07
1.21
1.05
46-65
aos
M
2.92
3.08
2.40
2.18
1.98
2.14
2.35
.92
.95
.76
1.03
.79
.79
.82
.82
3.74
3.77
4.14
3.24
4.07
4.17
3.43
4.01
D.T.
1.35
1.23
1.27
1.09
1.07
1.07
.96
7.49
5.42
6.09
2.04
.56
7.66
2.11
.001
.005
.002
n.s.
n.s.
.001
n.s.
.98
1.01
.90
1.01
.74
.84
1.03
.94
1.71
1.05
3.35
1.33
.77
3.28
1.90
.97
n.s.
n.s.
.036
n.s.
n.s.
.038
n.s.
n.s.
De acuerdo a los resultados obtenidos por la prueba Post hoc (Schffe), los docentes
ms mayores (46-65 aos) en comparacin con docentes de menor edad (21-30 aos) y de
edad intermedia (31-45 aos) sealan significativamente: (a) ms inconvenientes como la
falta de preparacin personal (21-30 aos vs. 46-65 aos F= -.57, p= .001; 31-45 aos vs. 4665 aos F= -.36, p= .03) y; (b) menos inconvenientes como la falta de disponibilidad de
material informtico en los centros (21-30 aos vs. 46-65 aos F= .52, p= .01; 31-45 aos vs.
46-65 aos F= .55, p= .003) y escasez de recursos didcticos (21-30 aos vs. 46-65 aos F=
.40, p= .02; 31-45 aos vs. 46-65 aos F= .54, p= .001). Adems, los docentes ms mayores
respecto a los docentes ms jvenes consideran menos positiva la variedad de cdigos de
informacin (F= .21, p= .04) y las caractersticas motivadoras de las TIC (F= .24, p= .04) y
ms negativamente el aumento del tiempo de dedicacin al utilizar las TIC (F= -.45, p= .005).
Discusin
El objetivo general de esta investigacin fue analizar las ventajas e inconvenientes
percibidos en el uso de las tecnologas de la informacin y la comunicacin (TIC) por los
maestros en activo de Educacin Infantil y Primaria en funcin del sexo y edad. De los
resultados del estudio se extraen las conclusiones siguientes.
La incorporacin de las TIC es todava escasa en las aulas, existiendo un 10,8% de los
maestros que no utilizan las TIC nunca y un 23,3% que las usa eventualmente (mensual o
trimestralmente). Slo uno de cada cuatro de los encuestados utiliza diariamente las TIC en el
aula.
En general, los maestros y maestras valoran de forma similar el uso de las TIC, si bien
las docentes valoran ms positivamente la facilidad de uso de las TIC en las aulas. Estos
hallazgos son contrarios a ciertos estudios que destacan una mayor tecnofobia en las mujeres
que en los hombres (Fuentes, 2005). Dado que hay una mayora de maestras en los niveles de
educacin infantil y primaria, las expectativas respecto a la innovacin docente es mayor que
978-84-695-8363-0
869
en los hombres, ya que los estudios de satisfaccin laboral (Anaya, 2006) en el sector
educativo dan resultados ms favorables a las profesoras que a los profesores.
Los maestros de ms edad (46-65 aos) en comparacin con docentes de menos edad
(21-30 aos) sealan significativamente menos ventajas y ms inconvenientes en la
utilizacin de las TIC como herramienta para su labor profesional. La formacin del
profesorado de educacin infantil y primaria sobre las TIC, puede ser insuficiente en el grupo
de profesorado de ms edad, asumiendo falta de preparacin para su uso en el aula.
En resumen, encontramos una divergencia entre las prcticas docentes y el uso de las
TIC y el enfoque curricular abierto que promueven las TIC en el alumnado. El profesorado
valora positivamente el aprendizaje cooperativo, la individualizacin de la enseanza, la alta
motivacin que produce en el alumnado y la interactividad que favorecen las TIC en el aula,
pero su aplicacin en el aula es escasa, debido al incremento de tiempo de preparacin de las
clases, y la falta de disponibilidad de equipos informticos en los centros de enseanza.
Por ltimo de cara a prximas investigaciones futuras, mejorando las cualidades
psicomtricas del cuestionario se podra continuar con el estudio, ampliando la muestra para
valorar las actitudes de los docentes hacia las TIC, en todas las etapas no universitarias.
Referencias
Anaya, D. y Surez, J. M. (2006). La satisfaccin laboral de los profesores en funcin de la
etapa educativa, del gnero y de la antigedad profesional. Revista de Investigacin
Educativa. Disponible en <http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=283321897012>
Area, M. (2008). Innovacin pedaggica con TIC y el desarrollo de las competencias
informacionales y digitales. Investigacin en la escuela, 64, 5-18
Aznar, I., Fernndez, F. e Hinojo, F. J. (2003). Formacin docente y TIC: elaboracin de un
instrumento de evaluacin de actitudes profesionales. Revista Etic@net, 2.
Balanskat, A., Blamire, R. y Kefala, S. (2006). The ICT impact report. A review of studies of
ICT impact on schools in Europe. European Schoolnet, European Comission.
Castells, M. (1998). La era de la informacin: economa, sociedad y cultura. Madrid:
Alianza.
Cuban, L. (1986). Teachers and machines: The classroom uses of technology since 1920.
New York: Teachers College Press.
Cuban, L. (2001). Oversold and underused. Computers in the classroom. Harvard: University
Press.
European Comission (2006). Benchmarking access and use of ICT in European schools 2006.
Final report from head teacher and classroom teacher surveys in 27 European
countries. Bonn, Germany: Empirica.
Fuentes, J. A. y Ortega, J. A. (2005). La tecnofobia como dficit formativo. EDUCAR, 36,
169-180.
978-84-695-8363-0
870
Gomis, N., Delgado, B., Gonzlez, M., Jover, I., Len, M.J., y Snchez, V. (2012). Psicologa
3-6: de la teora a la prctica. Alicante: ECU.
L.O.E. (2006). Ley Orgnica 2/2006, de 3 de mayo, de Educacin. Boletn Oficial del Estado,
04/05/2006.
Maj, J. y Marqus, P. (2002). La revolucin educativa en la era Internet. Barcelona:
CissPraxis.
Marchesi, A. y Martn, E. (2003). Tecnologa y Aprendizaje. Investigacin sobre el impacto
del ordenador en el aula. Madrid: SM.
Marqus, P. (2008). Las competencias digitales de los docentes. Madrid: Universidad
Autnoma de Barcelona.
Ortega, J. A. y Fuentes, J. (2003). La sociedad del conocimiento y la tecnofobia del colectivo
docente: implicacin desde la formacin del profesorado. Comunicacin y Pedagoga,
189, 63-68.
Sancho, J.M.(2006). Tecnologas para transformar la educacin. Madrid: Akal.
Tondeur, J., Van Braak, J. y Valcke M. (2007). Curricula and the use of ICT in education:
Two worlds apart? British Journal of Educational Technology, 38, 962-976.
978-84-695-8363-0
871
Resumen
El propsito de esta comunicacin es presentar parte de los resultados obtenidos en el
proyecto de investigacin Calidad Relacional, Inmersin digital y Bienestar Social desde
una Perspectiva de Gnero (BOJA 05/01/2008). En concreto, se exponen los resultados
obtenidos en relacin al nivel de inmersin digital en redes sociales de mujeres que viven en
zonas rurales de Andaluca (n=478), para lo cual se ha diseado una escala ad hoc vlida y
fiable (Alfa de Cronbach = 0,905). El objetivo principal es conocer y valorar el nivel de
inmersin digital en redes sociales para posibilitar el trazado de lneas de actuacin
adecuadas a cada situacin concreta. Los resultados muestran que el acceso y uso de las
redes sociales est muy generalizado por parte de las mujeres, sin embargo, se aprecia que la
rutinizacin en el uso de las redes sociales y la utilizacin creativa de las mismas se
encuentran poco desarrolladas.
Descriptores: redes sociales, Brecha Digital, Inclusin Digital, Gnero.
Abstract
The purpose of this paper is to present some of the results of the research project "Relational
Quality, Immersion Digital and Social Welfare from a Gender Perspective" (BOJA
05/01/2008). Specifically, it presents the results obtained in relation to the level of digital
immersion in social networks of women living in rural areas of Andaluca (n = 478), for
which we have designed an ad hoc scale valid and reliable (Cronbach's Alpha = 0.905). The
main objective is to understand and assess the level of immersion digital in social networks to
enable the tracing of lines of action appropriate to each situation. The results show that
access to and use of social networks is widespread by women, however, shows that the
routinization in the use of social networks and creative use of them are underdeveloped.
Keywords: Social Networks, Digital Divide, Digital Inclusion, Gender Issues.
Introduccin
El proceso de modernizacin que supone la integracin de las TIC y las redes sociales
en la sociedad actual, lleva consigo nuevas posibilidades de desarrollo econmico, profesional
y personal, pero tambin supone el riesgo de aparicin de nuevas desigualdades sociales y la
acentuacin de algunas que ya existan, por consiguiente se generan oportunidades pero stas
no se encuentran al alcance de todas las personas, de ah la importancia de lo que se ha
978-84-695-8363-0
872
denominado inmersin digital, que se define como la integracin, en todo su potencial, de las
tecnologas de la informacin y la comunicacin, en nuestro caso de las redes sociales, en la
vida diaria para apoyar altos niveles de desempeo profesional y personal.
Teniendo en cuenta los tres factores que se identifican con claridad como modulares
de la inmersin digital, dotacin, capacidad para el uso y creacin de nuevos modos de usos,
hemos diseado una escala que recoge el nivel de Inmersin digital en redes sociales
atendiendo a tres horizontes de integracin posible: ciudadana digital, inclusin digital y
participacin digital. Estos tres criterios que hemos utilizado para determinar el grado
Inmersin digital en redes sociales, se encuentran inspirados en las tres grandes lneas
estratgicas que se estn definidas en el Plan Andaluca Sociedad de la Informacin 20072010 (Consejera de Innovacin, Ciencia y Empresa de la Junta de Andaluca, 2006) llevado a
cabo por la Consejera de Innovacin Ciencia y Empresa y cuyo objetivo se centra en el
fomento de las TIC en la vida diaria de la ciudadana. Tambin, para la definicin y
establecimiento de los tres niveles de inmersin nos hemos basado en los distintos momentos
de desarrollo o evolucin de la brecha digital que sealan estudios anteriores (Castao, 2008;
Ambrosi, Peugeo y Pimienta, 2005; Cols, Pantoja, Orellana, Muoz y Espieira, 2012)
donde se identifican tres criterios de exclusin, el acceso a las tecnologas, la capacidad para
usarlas correctamente y la capacidad de uso creativo de las mismas.
Es importante remarcar que se ha acotado el concepto de inmersin digital al uso
exclusivo de las redes sociales obviando otras tecnologas digitales que hoy en da forman
parte de nuestro entorno. La definicin de los tres niveles de inmersin digital en redes
sociales se define a continuacin:
Nivel 2: Inclusin Digital (redes sociales). Se encontraran en este nivel aquellas personas
que acceden y participan asiduamente en las redes sociales con objetivos especficos
siendo consumidores/as de estructuras y contenidos ya diseados o elaborados. Resulta
muy relevante en este nivel la estabilidad temporal en su uso. Por lo tanto, este nivel
supone un nivel de rutinizacin de las redes sociales en la vida de las mujeres objeto de
estudio.
Nivel 3: Participacin Digital (redes sociales). En este ltimo nivel se encuentran aquellas
personas que adems de participar en las redes sociales de forma asidua, son
diseadores/as o autores/as de contenidos, estructuras e ideas, es decir, han superado el
papel de consumidores/as para ser creadores/as.
978-84-695-8363-0
873
entornos digitales, ya que pensamos que estudiar los factores que provocan inclusin es igual
o ms importante que conocer los factores de exclusin.
Mtodo
Para este estudio se ha utilizado un diseo ex post facto basado en la aplicacin de una
encuesta a mujeres de diversos municipios del entorno rural de la provincia de Sevilla con el
fin de conocer el nivel de Inmersin digital en las redes sociales, y de forma complementaria,
se aplica un diseo comparativo-causal con el objeto de explorar posibles diferencias en el
nivel de Inmersin digital en las redes sociales en funcin de las variables sociodemogrficas
de las mujeres. En el estudio, de la poblacin general de mujeres, se ha realizado un muestreo
estratificado por edad y municipios, a la vez que por cuotas en funcin del nivel de estudios.
As, la muestra se compone de 478 mujeres, las cuales son representativas de diferentes
grupos de edad: mujeres de hasta 25 aos (24,70%), mujeres de entre 26 y 39 aos (32,30%),
mujeres de entre 40 y 54 aos (32,10%) y mujeres de 55 aos o ms (10,80%); y proceden de
diversas zonas de la provincia de Sevilla: Aljarafe (41,21%), Bajo Guadalquivir (7,11%), La
Campia (11,50%), Sierra Norte (8,78%), Sierra Sur (25,31%) y Vega del Guadalquivir
(6,06%). Este tamao muestral (n=478) permite trabajar con un error muestral de 4,57%, para
un nivel de confianza del 95,5% con la mxima varianza proporcional p=q=50%.
El instrumento diseado y utilizado para recoger los datos de este estudio es un
cuestionario formado por varios bloques: uno de ellos se dedica a las variables
sociodemogrficas y otro est destinado a una escala sobre la Inmersin digital en las redes
sociales, que se compone de 21 tems (tipo Likert de 0 a 4) organizados en tres apartados:
Ciudadana Digital, Inclusin Digital y Participacin Digital. En cuanto a las propiedades
psicomtricas de la escala, los resultados son muy notables en cuanto a fiabilidad (Alfa de
Cronbach = 0,905) y validez; y adems, la saturacin media de los tems en el componente
principal es de 0,567 y la desviacin tpica es de 0,157, lo que indica que la correlacin de
todos los tems con la dimensin es ptima.
Resultados
Nivel de inmersin digital en las redes sociales de mujeres que viven en zonas rurales
Realizado el anlisis descriptivo (vase tabla 1), la media de Inmersin digital es de
37,27 sobre una puntuacin mxima de 84 (escala de 0 a 84), lo que indica que el nivel medio
de inmersin no alcanza los valores centrales; en cambio, es importante destacar que existe
una gran dispersin en la muestra de mujeres, ya que hay personas que se encuentran a un
nivel muy alto (mximo=84) frente a otras que estn a un nivel muy bajo (mnimo=5). En
cuanto a los resultados obtenidos para cada subdimensin de Inmersin digital (escala de 0 a
28), resulta destacable que el nivel 1 y 2 (Ciudadana Digital e Inclusin Digital,
respectivamente) obtienen mayores puntuaciones en la media (13,84 y 13,74,
respectivamente) que el nivel 3 (Participacin Digital con 8,47), lo cual indica que este tercer
nivel se encuentra todava en va de desarrollo y que muy pocas mujeres lo han alcanzado,
pudiendo esto estar incidiendo en los bajos niveles de Inmersin digital global.
978-84-695-8363-0
874
Tabla 1
Anlisis descriptivo de la Inmersin digital en las redes sociales
Inmersin digital en las
redes sociales
a. Ciudadana Digital
(0-28)
b. Inclusin Digital
(0-28)
c. Participacin Digital
(0-28)
Inmersin digital (0-84)
Estadsticos descriptivos
N
vlidos
N
perdidos
Media
Mediana
Moda
Desv.
Tp.
Mnimo
Mximo
436
42
13,84
14,00
13
4,360
24
448
30
13,74
14,00
15
6,663
28
459
19
8,47
8,00
6,126
28
417
61
37,27
38,00
38
13,818
84
En lo referente al nivel Ciudadana Digital, los resultados nos indican que hay dos
tems que alcanzan altas puntuaciones: tem 1 Tengo posibilidades de usar un ordenador en
casa que obtiene una puntuacin media de 3,50 sobre una puntuacin mxima de 4, siendo la
respuesta ms frecuente Totalmente con un 75,2%; e tem 3 Tengo posibilidades de usar
las redes sociales sin salir de casa obtiene una puntuacin media de 3,29 sobre una
puntuacin mxima de 4, siendo la respuesta ms frecuente Totalmente con un 70,2%. Esto
nos indica que entre un 70 y un 75% de las mujeres encuestadas tienen acceso a Internet y a
las redes sociales en su propio hogar. Aunque, por otra parte, las mujeres reconocen en el tem
2 Tengo posibilidades de acceder a zonas wifi gratuitas, con una media de 1,85 sobre 4 y
siendo las respuestas muy equitativas porcentualmente (Nada=25,4%, Poco=19,1%,
Suficiente=21,1%, Mucho=13,7% y Totalmente=20,7%), que con poca frecuencia
pueden acceder gratuitamente a Internet. El tem 4 Me han enseado lo suficiente para usar
las redes sociales no obtiene puntuaciones tan altas como los tems anteriores pero el 67,1%
de las respuestas se distribuyen entre las opciones Suficiente, Mucho y Totalmente, lo
que indica que ms de la mayora ha superado la primera etapa de manejo bsico. Son
remarcables tambin los datos obtenidos en el tem 7 He recibido cursos sobre redes sociales
de Internet en el que un 62% de las mujeres indican que no han recibido ninguno y el tem 5
Cuento con apoyo y asesoramiento para usar redes sociales donde un 50,2% se distribuye
entre las opciones Nada y Poco, lo cual indica que el uso de las redes se realiza en la
mayora de los casos de forma autodidacta. Finalmente, destacar el tem 6 Tengo posibilidad
de realizar cursos sobre redes sociales en mi municipio donde slo un 18,6% de la muestra
dice tener posibilidades.
En cuanto al nivel inclusin digital, los resultados muestran puntuaciones ms altas en
el tem 1 Utilizo las redes sociales habitualmente con una puntuacin media de 2,82 sobre
una puntuacin mxima de 4, siendo las respuestas ms frecuentes Totalmente con un
41,2%, Mucho con un 21,8% y Suficiente con un 19,6%; en el tem 4 Entro a diario en
mi red social para ver los ltimos movimientos y estar al da que obtiene una puntuacin
media de 2,60 sobre una puntuacin mxima de 4, siendo las respuestas ms frecuentes
Totalmente con un 35,9%, Mucho con un 21,8% y Suficiente con un 19,4%; y en el
tem 3 Publico informacin y comento la informacin que otros/as suben habitualmente con
una puntuacin media de 2,11 sobre una puntuacin mxima de 4, siendo la respuesta ms
frecuente Suficiente con un 26,9%, seguida por Poco con un 22,4%, Mucho con un
20,4% y Totalmente con un 18,5%. Esto nos indica que ms del 65% de las mujeres
encuestadas son usuarias de redes sociales diariamente con una presencia activa, por lo que se
puede afirmar que han alcanzado el nivel de Inclusin Digital. No obstante, el 68% de estas
mujeres admite que le provoca poco o ningn sentimiento negativo el no poder entrar en una
978-84-695-8363-0
875
red social a diario (tem 7: Me he acostumbrado tanto a usar la red que me disgusta no poder
hacerlo a diario). Por otra parte, tambin destaca que ms del 55% de las participantes en el
estudio responden Suficiente, Mucho y Totalmente al tem 2 Actualizo mi estado en
las redes sociales peridicamente. Adems, parece ser que aunque la mayora de las mujeres
encuestadas usan frecuentemente las redes sociales y tienen una presencia activa en ellas, no
han adquirido un hbito muy dependiente respecto a las redes sociales como se puede deducir
de las puntuaciones obtenidas en el tem 5 (Suelo usar las redes sociales desde dispositivos
mviles en cualquier lugar) y en el tem 6 (Sigo una rutina cuando uso mi red social):
un 54,7% y un 53,4%, respectivamente, distribuidas en las respuestas Nada y Poco.
Los resultados referentes a la Participacin Digital muestran, de manera generalizada,
puntuaciones muy bajas respecto a este tercer nivel de Inmersin digital. As, destaca
notablemente, con una puntuacin media de 0,69 sobre una puntuacin mxima de 4, que el
67,9% de las mujeres encuestadas admiten que no crean grupos ni propician la participacin
de otras personas en la red social (tem 6 Yo misma he creado un grupo en la red social y he
invitado a otras personas a participar). De la misma manera, sobresale los tem 2 (Participo
en distintos grupos temticos organizados en mi red social) y 1 (Participo activamente en
distintos debates que se plantean en mi red social), con medias bajas (1,01 y 1,09) y unas
puntuaciones del 70% y del 68,6%, respectivamente, distribuidas en las respuestas Nada y
Poco. Esto evidencia la escasa inmersin de las mujeres de zonas rurales en la
subdimensin Participacin Digital. Asimismo, las puntuaciones siguen siendo bajas,
resultado de las respuestas a las opciones Nada y Poco, en el resto de tems: un 60,5% en
el tem 7 (He enseado a usar la red social a otras personas que hoy da participan en ella),
un 56,1% en el tem 4 (Participo en actividades sociales que se organizan desde mi red
social), un 54,9% en el tem 3 (Acudo a las llamadas de apoyo que se hacen en mi red
social), y un 44,5% en el tem 5 (Intento animar la red con nuevos comentarios, fotografas,
enlaces, etc.).
Por todo ello, se puede sealar que las mujeres de zonas rurales an no han alcanzado
el mximo nivel de Inmersin digital, ya que, como se puede observar en la figura 1, la
primera subdimensin o nivel referente a la Ciudadana Digital, junto con el segundo nivel
acerca de Inclusin Digital, tiene mayor incidencia de respuesta, con alguna excepcin, en la
parte superior de la escala (respuestas que aluden a la opcin Mucho y Totalmente);
mientras que el tercer nivel relacionado con la Participacin Digital sobresale por predominar
la parte inferior de la escala (respuestas que apuntan a la opcin Nada y Poco). Esto nos
indica que la mayora de las personas participantes en el estudio s han alcanzado el nivel
Ciudadana Digital e Inclusin Digital, pero que, sin embargo, todava tienen pendiente
asumir el nivel Participacin Digital.
978-84-695-8363-0
876
978-84-695-8363-0
877
incluyen los tres estados civiles: soltera (media = 39,25), casada (media = 35,46) y viuda
(media = 31,42); por lo que aunque se observa que existe cierta diferencia en el grado de
Inmersin digital de las mujeres encuestadas segn su estado civil.
3. Inmersin digital de las mujeres de zonas rurales en funcin de la tenencia o no
tenencia de hijos e hijas
Realizada la prueba de contraste T de Student para las variables Inmersin digital y
Hijos/as se observa que hay diferencias significativas con un valor de p=0,000.
4. Inmersin digital de las mujeres de zonas rurales en funcin del tipo de redes sociales
que usan
Realizada la prueba de contraste ANOVA para las variables Inmersin digital y
Tipo de redes sociales se observa que hay diferencias significativas con un valor de
p=0,000. Las principales diferencias se establecen entre las mujeres que usan la red social
Facebook y Tuenti una de las dos redes sociales o las dos (media = 40,09) y las mujeres
que usan otras redes sociales distintas a stas y no especificadas (media = 21,21).
Discusin
El estudio de la Inmersin digital de las mujeres andaluzas, nos aporta la posibilidad
de conocer la situacin real con respecto al aprovechamiento, uso e integracin de las redes
sociales en la vida de estas personas. Como se ha indicado anteriormente, las mujeres que
viven en zonas rurales merecen especial atencin por dos cuestiones elementales: una, porque
se enfrentan a una situacin de desventaja mltiple, por razones de gnero y por razones del
hbitat rural donde viven; y dos, porque la comunidad autnoma de Andaluca es
especialmente sensible a la brecha territorial por contar con una amplia poblacin rural.
En cuanto los resultados obtenidos acerca de la disponibilidad y uso de las redes
sociales, tal y como indican otros estudios (Fundacin Telefnica, 2013; Castao, 2008;
Ambrosi, Peugeo y Pimienta, 2005) el acceso a las redes sociales es algo bastante
generalizado, aunque es importante remarcar que la muestra est compuesta por personas que
ya usan las redes sociales. En cuanto a la capacitacin para el uso de las redes sociales,
podemos sealar que segn los datos de los que disponemos, la competencia digital (Gilster,
1997) es adquirida en muchas ocasiones de forma autodidacta, a pesar los esfuerzos
gubernamentales hacia la formacin, en este sentido o no es suficiente o no se encuentra
debidamente difundida pues un alto porcentaje de mujeres declaran no tener posibilidades
formativas en sus municipios. Pensamos que una formacin especfica al respecto es
fundamental para acceder al tercer nivel de inmersin (Participacin Digital), puesto que para
la realizacin de un uso creativo de las redes sociales se requiere en muchas ocasiones un
nivel de profundizacin en las posibilidades que ofrecen las mismas como herramientas
tecnolgicas. Aunque es importante destacar tambin la importancia de la experiencia y el
aprendizaje informal entorno a las redes sociales digtales (Faulkner y Lie, 2007), adems de
entornos que faciliten una relacin positiva, segn Gil-Juarez, Vitores, Feliu y Vall-llovera
(2011), es necesario conocer factores que influyen positivamente en la atraccin hacia estos
entornos, conocer los factores de inclusin es igual o ms importante que conocer los factores
de exclusin (Faukner y Lie, 2007).
978-84-695-8363-0
878
Por otra parte, podemos comprobar cmo multitud de estudios inciden en que las
diferencias de acceso y usos que se realizan de las TIC, estn motivadas en parte a factores
sociodemogrficos, (como la edad, el estado civil, el nivel formativo, etc.) y el gnero (Butler,
2000; Jackson, Ervin, Gardner y Schmitt, 2001; Schumacher y Morahan-Martin, 2001), es
decir, las diferencias individuales de cada persona. En nuestro estudio hemos comprobado si
estos factores estn condicionando el nivel de inmersin en las redes sociales. En este sentido,
los resultados indican que en la poblacin de mujeres rurales la edad, el estado civil y el
nmero de hijos/as son condicionantes de su nivel de Inmersin digital. En cuanto a la edad,
la variable generacional se presenta como algo altamente condicionante en el uso y manejo
TIC ( Korupp y Szydlik, 2005; Cols, Pantoja, Orellana, Muoz y Espieira, 2012), por lo
tanto, resulta obvio que esta cuestin est incidiendo notablemente debido al constante
proceso de actualizacin que conlleva el uso de estas tecnologas. En cuanto al nmero de
hijos/as, cuestin que tambin incide notablemente en el nivel de Inmersin digital,
encontramos otros referentes anteriores (Korupp y Szydlik, 2005) que ya sealan su
importancia respecto a familias que no tienen hijos o hijas y las que tienen, particularmente
menores, ya que stos actan de estmulo para el uso y manejo como ayuda y seguimiento. El
estado civil (soltera, casada o divorciada) es tambin un elemento diferenciador, el cual
parece obvio, ya que las personas que se encuentran sin pareja estable pueden tener mayores
necesidades de interaccin o apoyo social.
Referencias
Ambrosi, A., Peugeo, V. y Pimienta, D. (2005). Palabras en juego: enfoques multiculturales
sobre las sociedades de la informacin. Caen: C&F Editions.
Butler, D. (2000). Gender, girls, and computer technology: whats the status now?. The
Clearing House, 73(4), 225-229.
Castao, C. (dir.) (2008). La segunda brecha digital. Madrid: Ediciones Ctedra.
Cols, P., Pantoja, A., Orellana, N., Muoz, J. M. y Espieira, E. M. (2012). Brecha digital e
inclusin educativa y social. En C. Jimnez, J. L. Garca, B. lvarez y J. Quintanal
(Eds.), Investigacin y educacin en un mundo en red (pp. 121-150). Madrid: McGrawHill.
Consejera de Innovacin, Ciencia y Empresa de la Junta de Andaluca (2006). Plan
Andaluca sociedad de la informacin 2007-2010 (ASI). Disponible en:
http://www.juntadeandalucia.es/servicios/planes/detalle/13210.html
Faulkner, W. y Lie, M. (2007). Gender in the information society: strategies of inclusion.
gender, technology and development, 11(2), 157-177.
Gil-Juarez, A., Vitores, A., Feliu, J. y Vall-llovera, M. (2011). Brecha digital de gnero: una
revisin y una propuesta. Revista Teora de la Educacin: Educacin y Cultura en la
Sociedad de la Informacin, 12(2), 25-53.
Gilster, P. (1997). Digital Literacy. Nueva York: Wiley.
Jackson, L. A., Ervin, K. S., Gardner, P. D. y Schmitt, N. (2001). Gender and the internet:
women communicating and men searching. Sex Roles, 44(5), 363-379.
978-84-695-8363-0
879
Korupp, S. y Szydlik, M. (2005). Causes and trends of the digital divide. European
Sociological Review, 21(4), 409-422.
Schumacher, P. y Morahan-Martin, J. (2001). Gender, internet and computer attitudes and
experiences. Computers in Human Behavior, 17(1), 95110.
978-84-695-8363-0
880
Resumen
Con la aparicin de la Web 2.0, caracterizada por ser una web ms social que permite
comunicar, entretener y compartir todo tipo de informacin, las denominadas redes sociales
online han alcanzado un mayor grado de popularidad. Nuestra propuesta se basa en analizar
cmo y de qu manera las mujeres andaluzas de zonas rurales interactan en dichas redes,
analizando sus experiencias y hbitos de usos a la hora de participar en ellas. Se realiza un
anlisis descriptivo y se exploran algunos contrastes para valorar la incidencia de variables
sociodemogrficas. Los resultados indican que las mujeres utilizan las redes sociales para
mantener un contacto permanente con familiares, amigos y conocidos. Son las mujeres
menores de 25 aos, solteras y estudiantes las que se muestran ms motivadas hacia el uso de
las redes sociales. Se indaga en los motivos por los cuales el 23,4% de estas mujeres
abandonan algunas redes sociales online.
Descriptores: Redes sociales, gnero, motivacin de uso, Internet, ambiente rural.
Abstract
With the emergence of Web 2.0, characterized by being a more social web which allows to
communicate, entertain and share all kinds of information, the so-called online social
networks have attained a higher degree of popularity. Our proposal is based on analyzing
how and what way the Andalusia rural women are interacting in these networks, analyzing
their experiences and usage patterns. We have performed a descriptive analysis and explored
some contrasts to assess the impact of socio-demographic variables. The results indicate that
women use social networks for staying in touch with friends and acquaintances or
maintaining strong families ties. Women under the age 25, who are single and students to be
appear more motivated towards the use of social networks. Also we explore the reasons why
23.4% of these women leave some online social networks.
Keywords: Social networks, gender, usage purposes, rural area.
Introduccin
Desde hace unos aos las redes sociales se han convertido en el fenmeno de moda en
Internet. En 2011 las redes sociales alcanzaron la misma penetracin a nivel mundial en
trminos de volumen absoluto que la telefona fija o que los mviles con acceso a banda
ancha. Facebook, que cuenta con 800 millones de usuarios a finales de 2011, es la de mayor
popularidad a nivel mundial, mientras que el nmero de adscritos a Twitter ha crecido la
978-84-695-8363-0
881
mitad que el ao anterior (Fundacin Orange, 2012). Estas cifras dan la razn a Manuel
Castells cuando afirma que la gente se organiza cada vez ms, no slo en redes sociales, sino
en redes sociales conectadas por ordenador (Castells, 2002, p.152). En la actualidad existen
cientos de redes sociales con distintas posibilidades tecnolgicas, que dan soporte a una
amplia gama de intereses y prcticas. Algunos sitios responden a un pblico variado, mientras
que otros atraen a la gente basndose en lenguaje o raza comn, sexo, religin o identidades
basadas en la nacionalidad (Boyd y Ellison, 2007).
La presencia femenina en las redes sociales
A partir de la llamada revolucin de la informacin, varias investigaciones
universitarias sealan que la experiencia de las mujeres en el uso de Internet es muy similar a
sus experiencias en ciencia y tecnologa en general. De ah que sea posible inferir que pueden
haber diferencias de gnero en el uso y contenidos en Internet, y que la red de redes refleja
especficos estereotipos de clase, raza y gnero (Kennedy, 2000 y Burkle, 2003). Tufekci,
citado en Clipson, Wilson y DuFrene (2010), desvela que en la mayora de las culturas
occidentales, las actividades de redes sociales relacionadas con mantener contacto con los
amigos y la familia son tpicamente dominados por las mujeres. Por su parte, Junco, Merson,
y Salter (2010) encontraron que las mujeres dedican ms tiempo enviando mensajes de texto e
interactuando en las redes sociales que los hombres.
En un estudio realizado por Caldevilla (2010a) se recoge que las mujeres espaolas han
incrementado en los ltimos aos en un 63% el uso semanal de Internet. Estos datos son
corroborados por el Informe eEspaa 2012 (Fundacin Orange, 2012), que adems estudia el
papel de la mujer en las redes sociales. Los resultados de este informe indican que las mujeres
y los hombres estn prcticamente al mismo nivel en cuanto al uso de las redes sociales
(69%y 70% respectivamente). Por otro lado, aunque en edades tempranas (de 16 a 25 aos) la
brecha existente entre hombres y mujeres es poco significativa, incluso superando en nmero
las mujeres que hacen uso de estas tecnologas al de los hombres, a medida que se avanza en
la pirmide de edad (a partir de los 35 aos) dicha brecha se va incrementando a la misma vez
que se reduce el porcentaje de usuarios de Internet. Estos aspectos, unido a que Internet est
desbancado poco a poco a la televisin y se est convirtiendo en el epicentro familiar -deja
atrs otros medios de comunicacin y formas tradicionales de relaciones sociales- nos resulta
de especial inters para nuestro estudio y, sobre todo, para conocer qu actividades son las
que realizan las mujeres en estos entornos.
Hbitos de uso en las redes sociales
La incorporacin y uso de las redes sociales virtuales en la vida cotidiana de las
personas implica un cambio en las relaciones personales; cambio que, por otro lado cuenta
con detractores y partidarios de las mismas. Mientras que las opiniones a favor abogan por el
aumento de la interaccin y conexin entre las personas, las principales preocupaciones en
contra hacen referencia al posible aislamiento social y falta de intimidad que algunas redes
pueden provocar. Lo que no nos cabe duda es que, tal y como lo hacen otras innovaciones
tecnolgicas, el uso de las redes sociales transforma los estilos de vida, permuta las prcticas,
as como el lenguaje y su vocabulario, pero todo ello a un ritmo tan acelerado que genera
confusin y desconocimiento de la usabilidad y los derechos en torno a su actividad (Ponce,
2012).
978-84-695-8363-0
882
Segn Del Moral, citado en Caldevilla (2010b), existen cuatro empleos generales que
fomentan el uso de las redes sociales:
9 Mantenimiento de amistades: significa seguir en contacto con amigos, colegas o
excompaeros de trabajo, etc., quienes, de no ser por estos servicios, iran perdiendo
relacin.
9 Nueva creacin de amistades: Si bien las redes mantienen el contacto entre personas que
se conocen, cada una de las personas que participa, relaciona de una forma u otra, a su
contactos con segundas o terceras personas, que pueden a su vez interactuar y conocerse.
As el amigo de un amigo, puede llegar a ser contacto y posteriormente amigo de un
tercero. Esto converge en la teora de Seis grados de separacin de Frigyes Karinthy. El
cual apuntaba que no requeriramos contactar con ms de seis personas para encontrar a
alguien siguiendo sus redes de amigos y conocidos.
9 Entretenimiento: Aunque las redes sociales sirven para interactuar y acrecentar las
relaciones, tambin hay un perfil de usuarios de stas que las usa como portal de
entretenimiento, sin ms pretensiones. Exploran las actualizaciones del estado de algunos
usuarios, se ponen al da sobre vidas ajenas, descubren los nuevos colegas de antiguos
compaeros de clase, etc. Pero no slo estas posibilidades nos ofrece el mundo 2.0 sino
que existen otras aplicaciones creadas por las propias redes sociales, que hacen que el
usuario participe ms activamente o pase ms tiempo conectado fomentando la
interaccin, casi segura, con algn otro contacto.
9 Gestin interna de organizaciones empresariales: sin duda, este uso est circunscrito a
empresas dentro de cuya estructura se crean redes sociales privadas para agilizar trmites,
comunicaciones, conferencias, informes o se crean otras redes simplemente para poder
estar en contacto con profesionales del sector, tanto a nivel laboral como personal.
Tomando en consideracin la importancia e influencia que actualmente poseen las redes
sociales online en las personas y la existencia de una brecha digital de gnero evidenciada por
los datos de diferentes estudios (Clipson, Wilson y DuFrene, 2010; Stoilescu y McDougall,
2011; Fundacin Orange, 2012), nuestra propuesta se basa precisamente en analizar cmo y
de qu manera las mujeres de zonas rurales interactan en dichas redes sociales. Para ello
analizamos las experiencias y hbitos de usos principales que las mujeres tienen a la hora de
participar en las redes sociales online.
Mtodo
Este trabajo presenta los resultados de un estudio descriptivo en el que se exploran
algunos contrastes expostfacto para valorar la incidencia de variables sociodemogrficas con
el fin de conocer las experiencias y hbitos de uso de las redes sociales de las mujeres de
zonas rurales de la provincia de Sevilla.
La muestra se compone de 478 mujeres pertenecientes a diferentes municipios de la
provincia de Sevilla, con edades comprendidas desde los 18 a 65 aos (con una media de
36,89). La mayora de las mujeres que integran la muestra son espaolas, viven en familia
tengan o no tengan hijos, tienen estudios medios o universitarios y tienen un empleo
remunerado.
El instrumento consiste en un cuestionario con dos dimensiones: la primera nos ayuda
a conocer el grado de satisfaccin de estas mujeres con las redes sociales, detectar el grado de
motivacin respecto al uso de las redes sociales, y el grado y los posibles motivos de
978-84-695-8363-0
883
abandono de alguna red social. En la segunda dimensin, se proponen seis escalas para
conocer los hbitos que estas mujeres muestran al interactuar con las redes.
Resultados
Respecto a las experiencias de uso que estas mujeres de zonas rurales tienen podemos
decir que, las redes sociales ms utilizadas son Facebook y Tuenti, principalmente, por ser
giles, rpidas, dinmicas, fciles de usar, entretenidas y divertidas (ver Figura 1).
Figura 2. Ranking de motivos por los que gustan las redes sociales
978-84-695-8363-0
884
Abundando en lo anteriormente expuesto, se detecta que los principales motivos por los
que las mujeres abandonan estas redes se deben a la poca utilidad que perciben en la red (ver
Figura 2).
En efecto, muchas de ellas se hicieron una cuenta, pero nunca la utilizaron porque sus
amistades no la usaban; resultados stos que concuerdan con el informe The Cocktail
Analysis (2011). Todo lo cual demuestra que, las funcionalidades o posibilidades que ofrece
cada red, parecen ser en trminos generales, aspectos secundarios que justifican el abandono.
En cuanto a los hbitos que las mujeres poseen, se observa cmo el 54,1% afirma
conectarse a las redes sociales siempre desde casa y a travs del ordenador porttil,
desbancado por primera vez al ordenador de sobremesa como principal medio para acceder a
Internet (ver Figuras 3 y 4); aspectos coincidentes con los expuestos en el informe eEspaa
2012 (Fundacin Orange, 2012), donde se recoge que, dos de cada tres hogares espaoles
utilizan este dispositivo para acceder a la Red.
978-84-695-8363-0
885
Con respecto a las actividades que realizan las mujeres en las redes sociales, los
resultados muestran cmo varias veces al da se comunican con sus contactos (24,7%),
semanalmente ven fotos (22,2%) y, una vez al da, siguen la actividad de sus contactos
(17,4%). En cualquiera de los casos, no llevan a cabo actividades tales como participar en
juegos (71,2%) y/o enterarse de ofertas profesionales (51,2%) (ver Tabla 1 y Figura 5).
Tabla 11
Frecuencia de actividades realizadas en las redes sociales
Seguir actividad
de contactos
Comunicarme
con contactos
Ver fotos
Actualizar/
Editar perfil
Informarme
eventos
Participar juegos
en red
Enterarme ofertas
profesionales
F
% vlido
F
% vlido
F
% vlido
F
% vlido
F
% vlido
F
% vlido
F
% vlido
Varias
veces
al da
66
14,0%
117
24,7%
85
17,9%
26
5,6%
30
6,4%
13
2,8%
19
4,1%
Una
vez al
da
82
17,4%
87
18,4%
90
19,0%
28
6,0%
57
12,2%
18
3,8%
19
4,1%
Varias
veces a la
semana
76
16,1%
124
26,2%
105
22,2%
39
8,4%
72
15,4%
25
5,3%
37
7,9%
Varias
veces
al mes
83
17,6%
61
12,9%
85
17,9%
59
12,7%
84
17,9%
11
2,4%
35
7,5%
Una
vez al
mes
26
5,5%
16
3,4%
29
6,1%
56
12,0%
40
8,5%
11
2,4%
27
5,8%
Rara
vez
Nunca
48
10,2%
28
5,9%
26
5,5%
118
25,4%
61
13,0%
57
12,2%
92
19,6%
91
19,3%
40
8,5%
54
11,4%
139
29,9%
124
26,5%
333
71,2%
240
51,2%
978-84-695-8363-0
886
Dicho lo cual, esto corrobora tres aspectos que Del Moral (2005) revela como
promotores del uso de las redes sociales; a saber: mantener las amistades ya existentes, crear
nuevas amistades y entretenerse. Del mismo modo, en un estudio desarrollado por Lampe,
Ellison y Steinfield (2006), las conclusiones mostraron que las personas encuestadas hacan
una distincin entre el mantenimiento de las relaciones existentes y las nuevas relaciones,
constituyendo las primeras el objetivo principal de los usuarios.
Por ltimo, hemos analizado qu personas forman la red social virtual de estas mujeres,
descubriendo cmo las amistades, compaeras y compaeros son los principales agentes con
los que interactan, quedando relegados a un segundo plano excompaeras, hermanas, e
incluso, la propia pareja.
Conclusiones
A raz de los resultados obtenidos podemos llegar a la conclusin de que las mujeres
que han participado en este estudio utilizan las redes sociales principalmente como medio
para mantener un contacto permanente con familiares, amigos y conocidos. Precisamente la
inexistencia de este tipo de relaciones con las personas de su entorno virtual es lo que provoca
que una tercera parte de estas mujeres, solteras en su mayora y con hijos o hijas, hayan
abandonado alguna red a lo largo de su vida.
En cuanto a los hbitos de uso, podemos decir que estas mujeres se conectan a las redes
sociales prcticamente a diario y casi siempre lo hacen desde casa y con su ordenador porttil,
lo que les garantiza un mayor nivel de privacidad. A este respecto cabe destacar que son
precisamente las mujeres menores de 25 aos, solteras y con un empleo remunerado las que
se muestran ms motivadas hacia el uso de las diferentes redes sociales online.
A modo de resumen queremos decir que es evidente que las redes sociales pueden tener
un enorme potencial y, queramos o no, afectan a todos los aspectos de nuestras vidas.
Acontecimientos que ocurren en lugares distantes y con personas que no conocemos pueden
influenciarnos e incluso determinar el curso de nuestra existencia. Al estar integrados en
978-84-695-8363-0
887
redes, por una parte, perdemos parte de nuestra individualidad pero, por otra, pasamos a
formar parte y a ejercer influencia en el comportamiento del grupo.
Cuanto ms fcil sea interactuar con una tecnologa, mayor debera ser el sentimiento de
eficacia del usuario y, por ende, mayor intencin de usarla (Chung, 2005). La gente se forma
sus intenciones hacia el uso de las redes sociales pensando en cmo mejorar el desarrollo de
su trabajo, de sus relaciones con sus contactos, etc., ms all de los sentimientos positivos o
negativos que pueden tener hacia el propio uso (actitud). La razn reside en que los
individuos usarn las redes sociales, nicamente si perciben que tal uso les ayudar a lograr la
tarea deseada (Lorenzo, Gmez y Alarcn, 2011).
Antes de acabar nuestras conclusiones, quisiramos hacer una breve alusin al mundo
en el que vivimos actualmente y en el que estamos hiperconectados. La sociedad cada vez
ms nos empuja hacia la ampliacin de nuestras redes sociales ya sean a nivel fsico como
tecnolgico. En este segundo sentido es precisamente el que ms nos preocupa, pues las
personas que cuenten con un mayor nmero de vnculos con otras personas tendr
posiblemente ms posibilidades de incrementar sus conexiones y de multiplicar as cualquier
tipo de informacin, dejando cada vez ms atrs a las personas con pocos vnculos lo que
intensificar una mayor brecha digital, potenciando de nuevo desigualdad de oportunidades
entre individuos.
Referencias
Boyd, D.M. y Ellison, N.B. (2007). Social network sites: definition, history, and scholarship.
Disponible en: http://jcmc.indiana.edu/vol13/issue1/boyd.ellison.html
Burkle, M. (2003). Technology has forgotten them: developing-world women and new
information technologies. En J. Malloy (Eds.), Women, Art and Technology (pp. 478-491).
MIT Press.
Caldevilla, D. (2010a). Mujeres 2.0. Una visin sobre el consumo de Internet de la mujer de
hoy. Revista Icono14, 8(1), 326-336.
Caldevilla, D. (2010b). Las Redes Sociales. Tipologa, uso y consumo de las redes 2.0 en la
sociedad digital actual. Documentacin de las Ciencias de la Informacin, 33, 45-68.
Castells, M. (2002). La era de la informacin. Vol. I. La Sociedad Red. Mxico: Siglo XXI
Editores.
Chung, D. (2005). Something for nothing: understanding purchasing behaviors in social
virtual environments. CyberPsychology & Behavior, 8(6), 538-554.
Clipson,T., Wilson, S. A. y DuFrene, D. D. (2010). The social networking arena: battle of the
sexes. Business Communication Quarterly, 75(1), 1-5.
Del Moral, J.A. (2005). Redes Sociales Moda o nuevo paradigma?. Madrid: Asociacin de
usuarios de Internet.
Fundacin Orange (2012). Informe eEspaa 2012. Informe anual sobre el desarrollo de la
sociedad de la informacin en Espaa. Madrid: Fundacin Orange.
978-84-695-8363-0
888
978-84-695-8363-0
889
Resumen
En esta comunicacin presentamos algunos resultados derivados de un proyecto de
investigacin de excelencia subvencionado por la Junta de Andaluca Calidad Relacional,
Inmersin Digital y Bienestar Social desde una Perspectiva de Gnero, que pretende dar a
conocer el uso de las redes sociales por parte de las mujeres de zonas rurales y la posible
influencia en su bienestar y calidad de vida. Realizamos un estudio descriptivo de tipo
encuesta con el fin de estudiar el tipo y grado de presencia social existente en las redes
sociales usadas por las mujeres de zonas rurales. La muestra participante asciende a un total
de 478 mujeres. Los resultados muestran, por un lado, que la presencia social en redes
sociales online suponen una oportunidad para mejorar la participacin, la interactividad e
inclusin en las redes y, por otro lado, que est definida principalmente por el componente
social y comunicativo pero no el afectivo.
Descriptores: Presencia Social, Rural, Mujer, Redes sociales online.
Abstract
In this paper we present some results from a research project of excellence funded by the
Junta de Andaluca "Relational Quality, Immersion Digital and Social Welfare from a Gender
Perspective" which seeks to highlight the use of social media by rural women and the possible
influence on their well-being and quality of life. We conducted a descriptive study survey to
study the type and extent of existing social presence in social networks used by rural women.
The participant sample amounts to a total of 478 women. The results show, first, that the
social presence in online social networks represent an opportunity to improve participation,
interactivity and inclusion in the networks and on the other hand, is defined primarily by
social and communicative component but not the affective.
Keywords: Social Presence, Rural, Women, Social Networking Online.
Introduccin
En este estudio, nos centramos en conocer el tipo y grado en que se da la presencia
social dentro de las redes utilizadas por las mujeres de las zonas rurales de la provincia de
Sevilla. Entendiendo dicho concepto como el proceso por el que las mujeres que estn
interconectadas entre s a travs de la red, sienten una interdependencia afectiva, actitudinal y
conductual con otras personas que conllevan a reducir la sensacin de soledad o aislamiento
978-84-695-8363-0
890
Estudios ms recientes como los de Agut, Peris, Grando y Lozano (2011), estudian la
presencia social en entornos virtuales de aprendizaje, realizando la adaptacin al espaol de la
medida de la presencia social de las mentes en red, de Harms y Biocca (2004). Toman como
referencia las diferentes dimensiones de los estudios de Garrison, Anderson y Archer (2000),
quienes consideran que las personas se sienten interconectadas a travs de interfaces de
comunicacin en red. Entienden la presencia social, como el grado de apercibimiento,
atencin localizada, comprensin afectiva y de contenidos, e interdependencia afectiva y
978-84-695-8363-0
891
conductual con otra persona. Desde esta consideracin es percibida como un constructo
compuesto por seis dimensiones: a) copresencia que alude al grado en que la persona siente
que no est sola y aislada en la red,; b) interdependencia afectiva percibida, entendida como
la capacidad para comprender el estado emocional y actitudinal del interlocutor/a;
c)interdependencia conductual percibida, alude al grado en que la conducta de los
interlocutores se afecta mutuamente; d) comprensin percibida del mensaje es la capacidad
para comprender el contenido de los mensaje de los dems; e) dedicacin atencional que hace
referencia a la cantidad de atencin que los interactuantes en la red se dedican mutuamente, y;
f) comprensin afectiva percibida, entendida como la capacidad para comprender el estado
emocional y las actitudes de la otra persona con la que interactuamos.
En este estudio, consideramos que la presencia social es un concepto muy complejo
por la diversidad de dimensiones que lo caracterizan, pero necesario para entender el contexto
social en el que se relacionan las mujeres de zonas rurales, ya que afecta al tipo y grado de
interaccin creada a travs del ordenador y concretamente a travs de las redes sociales. La
importancia de esta investigacin radica en que a partir del modelo para el anlisis de las
interacciones en entornos virtuales de aprendizaje (Anderson et al., 2001; Garrison et al.,
2001; Rourke et al, 2001; Agut et al., 2010), en este trabajo analizamos la presencia social de
las mujeres andaluzas en las redes sociales de Internet a travs de tres categoras: afecto,
interaccin y cohesin, algo totalmente novedoso en estos tipos de entornos, ya que hasta el
momento no se haba creado una escala vlida y fiable para medir este tipo de constructo en
las redes sociales.
Mtodo
El estudio se ha desarrollado aplicando el mtodo descriptivo de encuesta con el
propsito de conocer el tipo y grado de presencia social existente en las redes sociales usadas
por las mujeres de zonas rurales de la provincia de Sevilla.
La muestra fue seleccionada de entre la poblacin general mediante un muestreo
estratificado por edad, y dentro de cada estrato, por cuotas en funcin del nivel de estudios.
Dicha muestra estuvo constituida por 478 mujeres, lo que permiti fijar el error muestral en
4,57% para un nivel de significacin de 955%. Se han considerado como estratos los
municipios de la provincia y la edad. En cuanto a la edad, los estratos considerados son: 25
anos (24,7%), 26 a 39 aos (32,3%), 40 a 54 aos (32,1%) y > 55 anos (10,1%). En cuanto a
los municipios, los estratos considerados han sido las comarcas de la provincia de Sevilla
segn la siguiente distribucin: El Aljarafe (41,21%), Bajo Guadalquivir (7,11%), La
Campia (11,50%), Sierra Norte (8,78%), Sierra Sur (25,31%) y Vega del Guadalquivir
(6,06%).
Instrumento y procedimiento
Se disea, aplica y valida una escala de medida de la presencia social de las mujeres
en las redes sociales, inicialmente estaba compuesta por 18 items de tipo likert con opciones
de respuestas expresivas de intensidad (0 = nada, 1 = poco, 2 = suficiente, 3 = mucho y 4 =
totalmente) para el autoposicionamiento de las mujeres. Estos indicadores son organizados
segn las cinco dimensiones tericas explicadas anteriormente: a) copresencia, b)
interdependencia afectiva percibida, c)interdependencia conductual percibida, d)
comprensin percibida del mensaje,y; e) dedicacin atencional. Tras el anlisis de fiabilidad
y validez realizado mediante escalamiento ptimo (CATPCA), el procedimiento reliability de
978-84-695-8363-0
892
SPSS y anlisis factoriales, hemos eliminado los tems 1, 9 y 18 por presentar pesos
factoriales inferiores a 0,300 en el primer componente principal, quedando finalmente una
escala depurada y vlida que est compuesta por los 15 tems restantes. Una vez realizado el
escalamiento final y calculo de indicadores, obtenemos una muy alta fiabilidad (Alfa de
Cronbach = 0,912) para la escala finalmente obtenida. La unidimensionalidad y validez de
constructo viene indicada por los altos coeficientes de saturacin de todos los tems en el
primer componente principal (saturacin media =0,652, con una desviacin tpica es de
0,154) lo que indica la calidad de las medidas.
Para realizar la recogida de datos se cont con la colaboracin de las Agentes de
Igualdad de los Puntos de Informacin a la Mujer (PIM) de cada municipio. Estas fueron
entrenadas en una sesin formativa grupal donde se les presento el proyecto, para una correcta
administracin de la encuesta. Cada agente de igualdad encuest a 12 mujeres de cada
municipio, con un muestreo selectivo por cuotas, sin reposicin, dentro del territorio de su
responsabilidad, lo que determino la consecucin de los 478 cuestionarios finales.
El tratamiento de los datos procedentes de la escala de presencia social se realiza
mediante paquete estadstico SPSS-PC+ versin 15. Se realizan anlisis descriptivos bsicos
(frecuencias, porcentajes, medidas de tendencia central y dispersin para las variables
contempladas en el estudio).
Resultados
En este apartado presentamos los resultados obtenidos a partir de los anlisis
descriptivos realizados para conocer cmo es percibida la presencia social en las redes por
parte de las mujeres de las zonas rurales de la provincia de Sevilla. A continuacin, vamos a
exponer los principales resultados obtenidos a este respecto.
La tabla y figura 1, muestran la descripcin de la variable presencia social, donde se
han considerando todos los tems que componen la escala de tipo Likert, est medida en una
escala de 0-60 puntos (sumatorio de los 15 tems, de 0 a 4 puntos cada uno, cuya suma
compone la medida).
Tabla 1
Vlidos
Perdidos
Media
Mediana
Moda
Desv. tp.
Mnimo
Mximo
451
27
21,57
21,00
24
9,892
0
60
Pres
enci
a
Soci
al (0
60)
20
Frecuencia
25
15
10
0
0 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 1 2 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 2 62 7 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 4 04 1 42 43 44 45 47 48 60
978-84-695-8363-0
893
Media
1,89
Desv. Tip.
1,151
2,13
1,116
2,13
1,116
1,28
1,152
1,19
1,099
1,86
1,206
,91
1,013
,48
,756
,52
,859
2,41
1,251
2,45
1,052
1,54
1,117
1,54
1,117
1,28
1,106
2,13
,977
Como puede verse reflejado en la tabla anterior, los resultados obtenidos de un anlisis
pormenorizado por dimensiones e tems, nos muestra que los constructos como la copresencia
(tems 1 y 2), es decir la consciencia de presencia de otras personas, adems de sentirse
escuchadas y atendidas por las personas con las que interactan junto a la capacidad de
comprender y expresar los sentimientos y emociones a travs de la red ( tems 10 y 11), son
elementos altamente valorados por las mujeres que han respondido a la escala. Teniendo en
cuenta estos datos, las usuarias de las redes sociales consideran que su presencia es suficiente
o mucha en lo que se refiere a sentirse integrada, escuchada y comunicada con otras personas.
978-84-695-8363-0
894
Por otro lado, hemos identificado que los constructos relacionados con la
interdependencia afectiva (tems 4, 5 y 6), as como con la de tipo conductual (7, 8 y 9) no son
considerados como elementos bsicos por las mujeres para proyectarse a s mismas a travs
de las redes sociales de manera social y emocional.
Discusin
Este trabajo nos ha permitido identificar y contrastar empricamente factores
relevantes respecto a la percepcin que tienen las mujeres de la presencia social en las redes
sociales, a travs de una escala vlida y fiable que se ha creado para ello. Los resultados nos
han mostrado que los constructos como la copresencia, es decir la consciencia de presencia de
otras personas, junto a la capacidad de comprender y expresar los sentimientos y emociones a
travs de la red, adems de sentirse escuchadas y atendidas por las personas con las que
interactan fomentan un entorno virtual que promueve los sentimientos de cohesin y
compromiso con las otras personas. Estos datos concuerdan con los estudios de Agut et al.
(2011), que afirman que cuando las personas se sienten conectadas con su grupo, no se
sienten solas en el entorno y cuentan con la posibilidad de expresarse, compartir opiniones, o
solicitar ayuda a otras personas, es decir, perciben que estn ms integradas socialmente. As
mismo, investigaciones como las de Garrison, Anderson y Archer (2000) y Rourke et al.
(2001), ponen de manifiesto que, los principales indicadores que afectan a la percepcin de la
presencia social son el componente afectivo, relacionado con la identidad del propio grupo, la
motivacin y la cohesin, incentivadores todos ellos del sentimiento de integracin. En
efecto, mecanismos como la motivacin, comunicacin, participacin e interactividad son
variables que hemos considerado en nuestro estudio como principales indicadores para
mejorar la participacin, la interactividad entre la comunidad en lnea y el establecimiento de
lazos entre las personas que componen el grupo.
Por otro lado, hemos identificado que los constructos relacionados con la
interdependencia afectiva y conductual no son considerados esenciales por las mujeres para
proyectarse a s mismas a travs de las redes sociales de manera social y emocional. Esto
podra ser indicio de que las mujeres tienen mayor facilidad para conectar con otras personas
en el plano cognitivo que en el emocional. Esta diferencia podra deberse al hecho de que a
las mujeres nos resulta ms fcil informar sobre lo que nos sucede a nosotras mismas que
inferir sobre lo que le ocurre al otro; lo cual podra ayudar a explicar por qu las puntuaciones
de los tems relacionados con estos constructos han sido ms bajos. Esto puede afectar al tipo
y grado de interaccin creada a travs de las redes sociales. Entendemos que dichos
resultados podran orientar el diseo de las redes sociales, siendo la presencia social uno de
sus ejes centrales. As, en la medida en que estos entornos faciliten la interaccin con otras
personas (familia, amigos/as compaeros/as) de una forma sencilla, cercana y real,
fomentarn una mayor participacin y colaboracin. Ignorar estas cuestiones afectara
negativamente a la motivacin e implicacin en las redes sociales.
Referencias
Agut, S., Grando, A. y Lozano, F. (2011) Presencia social en entornos virtuales de
aprendizaje: adaptacin al espaol de la Networked Minds Social Presence Measure.
Revista Latinoamericana de Psicologa, 43(2), 279-288.
Anderson, T. D., Rouke, L., Garrison, D. R. y Archer, W. (1999). Social presence in
computer conferencing: chewing the phat(ic). Unpublished paper.
978-84-695-8363-0
895
978-84-695-8363-0
896
Resumen
El presente proyecto se adentra en el estudio de la interculturalidad en la Universidad
Europea de Madrid realizando un anlisis y descripcin de indicadores objetivos de
internacionalidad y aplicando a continuacin un cuestionario de sensibilidad intercultural a
la comunidad universitaria (estudiantes y docentes). El posterior anlisis de los datos arroja
informacin de gran utilidad para conocer las variables que modulan la interculturalidad y
sirven para poner en marcha estrategias de potenciacin y mejora de la misma. La
competencia intercultural es necesaria para que los profesionales del futuro puedan vivir y
desempearse mejor en las organizaciones; as, los datos obtenidos en este estudio nos
ofrecen buenas puntuaciones en sensibilidad intercultural entre profesores y estudiantes y
una mejorable tasa de experiencia internacional. Se prev el diseo de estrategias de
aprendizaje que potencien la competencia transversal de interculturalidad en todas las
titulaciones.
Descriptores: Interculturalidad, Educacin superior, Competencias.
Abstract
This project delves into the study of interculturalism at the Universidad Europea de Madrid
with the description and analysis of objective indicators of internationality and applying an
intercultural sensitivity questionnaire to the university community(students and teachers).
Further analysis of the data provides useful information about variables that modulate interculturality and serve to implement empowerment strategies to improve it. Intercultural
competences are necessary for future professionals to live and perform better in
organizations; the data obtained in this study will provide good intercultural sensitivity
scores between teachers and students and aim provable international experience rate. We
anticipate the design of learning strategies that promote intercultural cross competences in
all degrees.
Keywords: Inter-culturality, Higher education, Competencies.
Introduccin
El Informe Delors (1996) present Aprender a Vivir Juntos como uno de los cuatro
pilares de la educacin para el siglo XXI, en el que se conciben sociedades abiertas,
pluralistas y multiculturales. Hablar de realidad multicultural, obliga a hablar de
978-84-695-8363-0
897
978-84-695-8363-0
898
Tabla 1
Estudiantes
Edad
Gnero
Facultad/Escuela
68 (12,04%)
41 (7,27%)
65 (11,50%)
58 (10,26%)
162 (28,67%)
58 (10,26%)
113 (20,00%)
Tabla 2
Profesores
Edad
Gnero
Facultad/Escuela
16 (9,94%)
19 (11,80%)
20 (12,42%)
24 (14,91%)
37 (22,98%)
16 (9,94%)
29 (18,01%)
978-84-695-8363-0
899
categorizan los tems en: respuesta emocional positiva (tems 1, 3, 5, 7, 9, 10, 11, 12, 14, 17,
18, 20, 21, 23 y 24) y respuesta emocional negativa (tems 2, 4, 6, 8, 13, 15, 16, 19 y 22).
La Respuesta emocional positiva constituye habilidades que tienen una mayor
implicacin en una relacin de comunicacin intercultural aceptando y respetando a los
culturalmente distintos. La respuesta emocional positiva incluye habilidades referidas al
bienestar de la interaccin con personas de otras culturas, al sentimiento de seguridad en la
relacin con otros o en la valoracin positiva, al respeto y la tolerancia con sujetos de otras
culturas. La Respuesta emocional negativa integra actitudes y conductas de evitacin y falta
de tolerancia hacia los otros as como mayor inseguridad en las relaciones con personas de
otras culturas. Los sujetos con alta respuesta emocional negativa no sienten predileccin por
relacionarse con extranjeros ni se sienten emocionalmente cmodos en situaciones de
interaccin con otras culturas.
Procedimiento
Se distribuy el cuestionario en formato on-line con la plataforma Google Drive a toda
la comunidad de profesores y estudiantes de grado de la universidad. Para los docentes, se
cont con la colaboracin del departamento de Recursos Humanos que mediante correo
electrnico a todos los profesores con contrato laboral inform de los objetivos de nuestro
estudio resaltando la importancia de participar en l. En el caso de los estudiantes, los
miembros del equipo que participan en este proyecto les enviaron un correo electrnico. La
base de datos de sus direcciones fue facilitada por el Vicerrectorado de Alumnos de la UEM.
En ambos casos se explicaba el objetivo del estudio y se daban unas breves instrucciones para
rellenar un cuestionario que debera llevar entre 15 y 20 minutos de tiempo para responder
incluyendo los enlaces para acceder al cuestionario on-line.
Anlisis de datos
Los anlisis estadsticos se realizaron con el programa informtico SPSS 20.
Resultados
Experiencia Intercultural
En cuanto al estudio de otros idiomas, el 87,70% de los estudiantes dice haber
estudiado mucho el espaol, el 81,70% dice haber estudiado mucho el ingls y el 60,90% dice
haber estudiado poco el francs. Respecto del alemn, es destacable que el 21,5% no responde
y el 72,4% de los que contestan afirman no haber estudiado nada este idioma. Slo el 9,20%
de los estudiantes dice haber estudiado otros idiomas adems de los citados. De los 554
estudiantes que respondieron a la pregunta sobre si haban vivido en el extranjero, no lo
hicieron 259 (46,75%) y 295 (53,25%) s haban vivido fuera de su pas de origen; de stos el
66,44% haba vivido fuera menos un ao y el 33,56% durante ms de un ao. Las cifras de
estudiantes que han viajado al extranjero son superiores; destacando que de las 553
respuestas, 327 (59,14%) lo han hecho al menos 9 veces y muy pocos (el 2,47%) dicen no
haber viajado nunca.
De los 552 que respondieron a la pregunta de si haban participado en algn programa
de intercambio, 391 (70,83%) no se habran acogido a ninguno de ellos. Del resto,
encontramos respuestas positivas mayoritarias para los programas Erasmus (50 alumnos) y
978-84-695-8363-0
900
para cursos de bachiller y/o estancias de aprendizaje de idiomas (44 alumnos). Resaltamos
que 39 estudiantes disfrutaron de una estancia internacional gracias a los convenios bilaterales
que la UEM ha establecido con otras instituciones fuera de los programas tradicionales.
Adems, 19 de los alumnos que han contestado a la encuesta has disfrutado de una estancia
internacional en universidades de la red Laureate a la que pertenece esta institucin y que
tiene centros en los cinco continentes.
Vemos en la Tabla 3 la tasa de respuestas positivas y negativas respecto de los tems
que hacen referencia a la convivencia, relaciones y asistencia a eventos de tipo internacional.
Tabla 3
Experiencia Intercultural
Docentes
Estudiantes
SI
NO
SI
NO
87 (54,37%)
73 (45,63%)
333 (58,30%)
238 (47,70%)
103 (64,37%)
57 (35,63%)
350 (61,90%)
216 (38,20%)
131 (81,87%)
29 (18,13%)
423 (74,10%)
148 (25,90%)
140 (87,50%)
20 (12,50%)
525 (92,10%)
45 (7,90%)
117 (73,12%)
43 (26,88%)
302 (53,20%)
266 (46,80%)
150 (93,73%)
10 (6,25%)
447 (78,70%)
121 (21,30%)
121 (75,62%)
39 (24,38%)
360 (63,10%)
210 (36,80%)
137 (87,26%)
20 (12,74%)
432 (75,80%)
138 (24,20%)
978-84-695-8363-0
901
Estudiantes
M (DT)
4,30 (0,92)
4,65 (0,62)
4,21 (0,84)
4,63 (0,76)
Docentes
M (DT)
4,41 (0,31)
4,84 (0,39)
4,30 (0,79)
4,77 (0,51)
4,12 (1,21)
4,22 (1,06)
4,06 (1,29)
4,23 (1,16)
4,62 (0,72)
4,77 (0,49)
4,17 (0,83)
4,38 (0,70)
4,07 (1,00)
4,54 (0,69)
4,62 (0,66)
4,11 (1,05)
4,18 (0,94)
4,64 (0,56)
4,72 (0,56)
4,28 (0,91)
3,64 (1,11)
3,68 (1,15)
4,40 (0,72)
4,46 (0,72)
4,40 (0,74)
4,49 (0,61)
4,17 (0,91)
4,36 (0,74)
978-84-695-8363-0
interesantes
Respuesta Emocional Negativa
2 Encuentro difcil comprender a personas de otras culturas
4 Me es difcil hablar con personas de otras culturas aun conociendo su idioma
6 Me incomodo con ms frecuencia cuando me relaciono con extranjeros
8 No me agrada trabajar con personas de diferentes culturas
13 Con frecuencia me desespero cuando trabajo con personas de otros pases
15 Estoy ms alerta cuando me relaciono con personas de otra cultura
16 No confo en mis habilidades para comunicarme cuando me relaciono con
extranjeros que hablan otra ..
19 Me cuesta ms aceptar las opiniones de personas extranjeras que de las de mi
propia cultura
22 Tiendo a evitar aquellas situaciones que me exigen relacionarme con personas
de otras culturas
902
2,04 (1,17)
2,35 (1,13)
1,95 (1,11)
2,14 (1,20)
1,65 (1,14)
1,97 (1,10)
2,58 (1,22)
2,27 (1,26)
2,03 (0,38)
2,09 (1,09)
2,04 (1,21)
2,14 (1,25)
1,51 (1,07)
1,89 (0,10)
2,69 (1,23)
2,49 (1,27)
1,86 (1,06)
1,81 (1,12)
1,57 (0,79)
1,62 (0,84)
978-84-695-8363-0
903
universitaria. El rango de edad de los estudiantes (19-63) es amplio porque la UEM ofrece
programas compatibles con la actividad laboral. En ambos grupos, las mujeres que participan
son ms que los hombres y abrimos a partir de este dato una nueva pregunta de investigacin
para el futuro donde sera interesante conocer si el gnero condiciona un mayor o menor
inters por la interculturalidad. Nos hemos encontrado con una muestra fundamentalmente
nacional ya que cerca del 80% de los estudiantes y 9 de cada 10 profesores que participan en
esta encuesta son de nacionalidad espaola. Sin embargo, a favor de la diversidad en el aula y
la sensibilidad intercultural, valoramos positivamente que el 20% de los estudiantes sea de
nacionalidad distinta a la espaola. El 30% de los estudiantes dicen haberse acogido a algn
programa de movilidad internacional y consideramos que es una cifra positiva frente a otros
estudios (Osma, 2012). Este hecho puede deberse a que la UEM dispone de mayores opciones
de movilidad gracias a la pertenencia a una red internacional de universidades. Nos parece
interesante combinar este porcentaje con el dato de que un 73,64% de los estudiantes no
espaoles llevan residiendo en Espaa 4 aos o menos. Casi la mitad de los profesores de la
UEM ha participado en algn programa de movilidad. El hecho de que estos resultados sean
positivos no impide que haya que seguir promoviendo y desarrollando estrategias de fomento
de la interculturalidad en el aula y en la universidad en estudiantes y profesores. Son stos
ltimos un elemento clave para promover las competencias de interculturalidad en los
estudiantes. Todava pensamos que estamos lejos de la situacin de otras universidades en
Europa y Estados Unidos. Es interesante observar que tanto estudiantes como profesores
informan positivamente y en porcentajes siempre superiores al 50% (en la mayora de los
tems, del 70%) a las preguntas que tienen que ver con sus experiencias de convivencia con
extranjeros, amistades y familiares que viven fuera y asistencia a ferias, fiestas o exposiciones
de otras culturas. Son datos de frecuencia que nos informan que estudiantes y profesores
tienen experiencia internacional. Pensamos que estos datos constituyen una buena base sobre
la que seguir construyendo modelos de interculturalidad. Los datos obtenidos sobre
sensibilidad intercultural nos cuentan que tanto estudiantes como docentes tienen actitudes
positivas respecto de la diferencia y la interculturalidad; la aceptan, la toleran y les interesa,
aunque en ambos grupos la inseguridad en uno mismo respecto del manejo de idiomas,
constituye una de las mayores barreras. Es, sin duda, uno de los inconvenientes ms
caractersticos de nuestra cultura; la idea de poder ser juzgado por otros constituye un
elemento nuclear en la falta de audacia a la hora de afrontar conversaciones en idiomas
distintos al nuestro. A pesar de que culturalmente estemos condicionados por esta
circunstancia, el trabajo de la autoestima y la constatacin de consecuencias positivas por el
hecho de afrontar estas situaciones, debera ser fundamental en el planteamiento del fomento
de competencias en los estudiantes y profesores.
Cuando se han analizado las diferencias de medias de puntuacin entre los dos
colectivos, es interesante observar que los profesores parecen ser ms proclives a puntuar ms
alto en muchos de los tems agrupados en respuesta emocional positiva y pensamos que este
hecho pueda deberse a su experiencia. As, cabe que de aqu surja una nueva pregunta de
investigacin; conocer las variables psicolgicas y sociales que subyacen a estas diferencias.
Finalmente, que un estudiante o un profesor estudie/trabaje en un rea o disciplina especfica
no parece ser un factor determinante para explicar la sensibilidad intercultural, por lo que
podramos pensar que los estereotipos respecto del perfil profesional en este campo, no tienen
mucho fundamento. La sensibilidad intercultural es excelente pero la experiencia
internacional es an baja, aunque si lo comparamos con otras instituciones las cifras son ms
positivas. Los pasos que en el futuro vayamos dando tratarn de aportar ms datos de inters
que sirvan para la puesta en marcha de acciones encaminadas al fomento de competencias
interculturales en estudiantes y profesores.
978-84-695-8363-0
904
Referencias
Chen, G.M. y Starosta, W. (2000). The development and validation of the Intercultural
Sensitivity Scale. Human Communication, 3(1), 2-14.
Cornwell, G. y Stoddard, E. (1999). Globalizing knowledge: Connecting international &
intercultural studies. The academy in transition. Washington: Association of
American Colleges and Universities.
Consejo
Europeo
(2008).
Libro
Blanco
de
dilogo
intercultural.http://www.coe.int/t/dg4/intercultural/source/white
paper_final_revised_en.pdfStrasbourg, France: Committee of Ministers, Council of Europe.
De Santos Velasco, F. J. (2004). Desarrollo de la competencia intercultural en alumnado
universitario: una propuesta formativa para la gestin de empresas multiculturales.
Universidad de Barcelona.
Deardorff, K. (2011). Assessing intercultural competence. New Directions for Institutional
Research,149, 65-79.
Delors, J. (1996). La educacin encierra un tesoro. Informe a la UNESCO de la Comisin
Internacional sobre educacin para el siglo XXI. Madrid: Santillana Editores.
Gallifa, J. y Pedro, F. (2001). Quin futur t la Universitat? Vint visions sobre la Universitat a
Catalunya. Barcelona: Proa Debat.
Mrquez, E. y Garca-Cano, M. (2004). Debates sobre educacin intercultural desde su
prctica en el aula. Portularia, 4,143-152.
Osma, J., Crespo, E., Fermoselle, E. (2012). Evaluacin de la sensibilidad intercultural en la
Universitat Jaume I: datos preliminares sobre una muestra de jvenes estudiantes.
Disponible en
<http://www.quadernsdigitals.net/index.php?accionMenu=hemeroteca.VisualizaArticu
loIU.visualiza&articulo_id=11075&PHPSESSID=8575d0fa1a0ee1c7a6afd15ca41e10
53> Fecha de consulta 23/04/2013.
Sez, R. (2006). La educacin intercultural, Revista de Educacin,339, 859-881.
Tourin, J. M. (2010). Familia, escuela y sociedad civil. Agentes de educacin intercultural,
Revista de Investigacin en Educacin, 7, 7-36.
Vil, R. (2006). La dimensin afectiva de la competencia comunicativa intercultural en la
Educacin Secundaria Obligatoria: Escala de Sensibilidad Intercultural. Revista de
Investigacin Educativa, 24(2), 353-372.
978-84-695-8363-0
905
Resumen
El presente trabajo analiza las actitudes hacia la educacin inclusiva y los conocimientos
acerca de la misma que manifiesta el alumnado del Grado en Pedagoga de la Universidad
de Valencia. El estudio conformado por una muestra de 182 alumnos y alumnas evidencia las
relaciones entre actitudes, conocimientos y determinados factores sociodemogrficos,
experiencia laboral y contacto con asociaciones u ONGDs relacionadas con la educacin
inclusiva. Este estudio pone de manifiesto la escasa formacin percibida por el alumnado
acerca de la educacin inclusiva as como la conveniencia de mejorar o aumentar la prctica
profesional y la participacin en asociaciones u ONGDs vinculadas a este mbito educativo.
Descriptores: educacin inclusiva, actitudes, conocimientos, universidad, escala.
Abstract
This paper analyzes the attitudes towards inclusive education and knowledge about the
inclusive education manifested by Education students at the University of Valencia. The
study comprised a sample of 182 students evidence the relationship between attitudes,
knowledge and certain sociodemographic factors, work experience and contact with
associations or NGDOs related to inclusive education. This study highlights the lack of
training received by the students about inclusive education and the desirability of enhancing
or increasing professional practice and participation in associations or NGDOs linked to this
education.
Keywords: inclusive education, attitudes, knowledges, university, scale.
Introduccin
Entendemos la educacin inclusiva como el ejercicio del derecho inalienable a una
educacin plena, de calidad y para todos, que garantice el desarrollo personal y la integracin
social mxima posible, asumiendo la diversidad del alumnado como uno de los ejes del
proceso curricular (UNESCO, 2008). El trmino conocimientos es referido en este trabajo a
la formacin inicial que los estudiantes, en este caso, del Grado en Pedagoga estn
adquiriendo su formacin en la Facultad de Filosofa y Ciencias de la Educacin de la
Universidad de Valencia. En cuanto a la actitud, la consideramos, desde la teora de la
accin razonada, como una predisposicin aprendida a responder de forma consistente
978-84-695-8363-0
906
favorable o no- ante personas, objetos o situaciones (Novo-Corti, Muoz-Cantero y CalvoCorral, 2011).
Numerosas instituciones y organismos destacan el carcter crucial que la formacin
inicial de los profesionales tiene para el xito de una educacin inclusiva real. No menor,
segn los mismos organismos, es el de las actitudes de dichos profesionales. (ONU, 2006;
UNESCO, 2008; CERMI, 2010). Otros estudios han abordado con anterioridad este mismo
tema desde colectivos y enfoques similares (e.g. Infante y Gmez, 2004; Sandoval, 2009;
Conde, 2012; Vega, 2008; Llorent y Llorent, 2012; Chiner y Cardona, 2013; Miller, Morfidi y
Soulis, 2013; Moliner, Sales, Ferrandez y Traver, 2011; Savolainen, Engelbrecht, Nel y
Malinen, 2012; Wang, Zan, Liu, Liu y Sharma, 2012)
El propsito del presente trabajo se centra en (1) describir las actitudes y
conocimientos hacia la educacin inclusiva manifestados por el alumnado del Grado en
Pedagoga de la Universidad de Valencia; (2) identificar la relacin de determinadas variables
de tipo sociodemogrfico y su influencia en las actitudes hacia la educacin inclusiva y en los
conocimientos acerca de la misma. Se pretende con ello evidenciar aspectos positivos y
aspectos mejorables del actual plan de estudios del Grado en Pedagoga para cumplir aquellos
objetivos y competencias relacionadas con la formacin necesaria para conseguir una
educacin verdaderamente inclusiva (Verifica del Grado en Pedagoga de la Universidad de
Valencia, Obj 2; Competencias G11, E31 y E37).
Mtodo y procedimiento
La presente investigacin utiliza una metodologa cuantitativa, no experimental,
descriptiva, mediante encuesta (Mcmillan y Shumacher, 2005), empleando tcnicas de
contraste no paramtricas, a fin de determinar la relacin entre las variables estudiadas, dado
que las puntuaciones de la muestra no presentaron una distribucin normal (Pallant, 2003).
El Cuestionario de Actitudes, Conocimientos y Experiencias previas hacia la
Educacin Inclusiva (CACEPEI), se conform en torno a 3 bloques: (a) aspectos
sociodemogrficos de la muestra, (b) Escala de Actitudes hacia la Educacin Inclusiva (EA)
de Cardona y Gmez-Canet y Gonzlez-Snchez (2000) y (c) Escala de Conocimientos sobre
la Educacin Inclusiva (EC) confeccionada para el estudio. El CACEPEI se administr en dos
formatos: (a) impreso y (b) versin online, desarrollada con el software Limesurvey a una
muestra no probabilstica, disponible intencional (MacMillan y Shumacher, 2005) constituida
por el alumnado del Grado en Pedagoga de la Universidad de Valencia.
Anlisis de fiabilidad
El ndice de fiabilidad Alpha de Cronbach de la EA hacia la educacin inclusiva fue
determinado por Cardona (2003) en .90. Tras la recogida de informacin, se comprob el
ndice de fiabilidad de la EC construida para la ocasin. Los resultados del test Alpha de
Cronbach evidenciaron una fiabilidad de .90. Los indicadores de correlacin inter-elemento
no sealaron que dicho ndice mejorara suprimindose alguno de los tems. En consecuencia,
el coeficiente de fiabilidad obtenido es alto, dotando de consistencia interna a la escala
(Kerlinger y Lee, 2002).
978-84-695-8363-0
907
Descripcin de la muestra
El cuestionario CACEPEI fue administrado durante el segundo cuatrimestre del curso
acadmico 2012/2013 a un total de 182 alumnos y alumnas, de los cuales el 88.4% (n=161)
fueron mujeres y un 11.54% (n=21) hombres. La edad de los participantes estuvo
comprendida entre 19 y 54 aos, con una media de 21 aos (M=21.6; SD=4.3). La muestra
estuvo integrada por los 4 cursos de la titulacin, correspondiendo el 59.3% (n=108) a
alumnado de primer y segundo curso (Ver Tabla 1).
Tabla 1
Distribucin de la muestra de estudio por cursos
Curso
1
2
3
4
N
69
39
47
27
%
37.91
21.43
25.82
14.84
978-84-695-8363-0
908
Tabla 2
Actitudes de los alumnos hacia la educacin inclusiva
Item
It1 - Separar a los nios/as y jvenes con
NEAE del resto de sus compaeros y
compaeras es injusto
It1 - La educacin inclusiva favorece en los y
las estudiantes el desarrollo de actitudes
tolerantes y respetuosas con las diferencias
It3 - Todo el alumnado, incluso aquellos o
aquellas con discapacidades de un grado
moderado y severo, pueden aprender en un
entorno normalizado
It4 - La educacin inclusiva es tambin
posible en la educacin secundaria
It4 - La inclusin tiene ms ventajas que
inconvenientes
It5 - Soy una persona partidaria de la
educacin inclusiva
It6 - Una atencin adecuada de la diversidad
requiere la presencia en las aulas de otros y
otras docentes, adems del profesorado-tutor
%
3
SD
8.3
26.5
51.9
4.08
1.25
.5
3.3
27.5
68.7
4.64
.57
.6
9.4
14.9
40.9
34.3
3.99
.96
1.6
6.0
37.4
54.9
4.46
.68
1.1
3.3
10.4
37.4
47.8
4.27
.86
3.8
28.6
67.6
4.64
.55
.5
1.6
10.4
33.5
53.8
4.38
.78
8.8
4.4
Por lo que respecta a la EC la puntuacin general fue baja (M=2.9, SD=.9). De hecho,
el alumnado manifiesta no poseer los conocimientos adecuados acerca de la educacin
inclusiva. A excepcin de los tems 5 y 7, el resto obtiene una puntuacin inferior a la media
de la escala Likert. nicamente las cuestiones referentes a la capacidad del alumnado para
hacer frente a situaciones inclusivas se sitan levemente por encima de la media de la escala
(Ver Tabla 3).
Tabla 3
Conocimientos del alumnado acerca de la educacin inclusiva
Item
It1- Conozco los planteamientos de la LISMI, la
LOE y la Convencin de la ONU sobre derechos de
las personas con discapacidad
It2- Estoy en condiciones de realizar un diagnstico
a un alumno o alumna con n.e.a.e
It3- Conozco las distintas modalidades de
escolarizacin hacia las que derivar a un alumno o
alumna con n.e.a.e.
It4- Puedo orientar sobre las propuestas
organizativas que deberan incluirse en el PEC para
llevar a cabo una educacin inclusiva
It5- Soy una persona capacitada para asesorar sobre
las adaptaciones metodolgicas que pueden
utilizarse dentro del aula para atender a la diversidad
del alumnado
It6- Puedo orientar sobre las salidas profesionales
del alumnado con n.e.a.e
It7- Me siento una persona capacitada para
desempear mi trabajo de acuerdo a las exigencias
de la educacin inclusiva
%
3
SD
13.3
29.3
30.4
21.0
6.1
2.77
1.11
17.1
26.0
34.8
18.8
3.3
2.65
1.07
13.2
24.2
30.2
27.5
4.9
2.87
1.11
12.8
24.0
34.1
24.6
4.5
2.84
1.07
7.1
23.1
32.4
32.4
4.9
3.05
1.02
19.3
24.9
28.2
21.5
6.1
2.70
1.18
5.5
10.4
28.0
35.7
20.3
3.55
1.09
978-84-695-8363-0
909
H
2,108
Actitudes
p
Rango promedio
,716
93,36
81,23
97,68
85,24
85,24
H
17,366
Conocimientos
p
Rango promedio
,002
125,86
103,96
102,83
77,24
21,75
Discusin
Los resultados referidos a los conocimientos ponen de manifiesto la percepcin del
alumnado del Grado en Pedagoga de la Universidad de Valencia respecto a la escasa
978-84-695-8363-0
910
formacin en los temas necesarios para desarrollar una educacin verdaderamente inclusiva.
Pese a ello, las actitudes que manifiestan hacia tal educacin son altamente positivas.
Al mismo tiempo el trabajo pone de manifiesto la vinculacin existente entre las
actitudes hacia la educacin inclusiva y los conocimientos sobre la misma. Del mismo modo
la muestra del estudio ha evidenciado la relacin entre los conocimientos sobre la educacin
inclusiva y el hecho de trabajar en el sector o participar en actividades de asociaciones u
ONGDs con mayor asiduidad. Sin embargo, destaca la nula relacin entre las actitudes y la
experiencia profesional o participacin activa en entidades vinculadas a la educacin
inclusiva.
Por ltimo se ha descrito una clara correlacin entre los conocimientos sobre la
educacin inclusiva y la edad o nivel acadmico de los participantes.
Prospectiva
El estudio presentado sugiere una revisin de los planes de estudios del Grado en
Pedagoga de la Universidad de Valencia, que capacite adecuadamente a sus egresados, a fin
de que puedan atender profesionalmente a las exigencias de una educacin inclusiva.
Igualmente enriquecedora resultara la incorporacin de prcticas profesionales
relacionadas con la educacin inclusiva, como integrantes de la mejora en los conocimientos
y actitudes hacia aquella.
Una continuacin de nuestro estudio nos llevar a analizar una variable que intuimos
determinante: la influencia que tiene en las actitudes hacia la educacin inclusiva y
conocimientos sobre la misma el contacto previo con personas con n.e.a.e., delimitando la
tipologa, intensidad y frecuencia de dicho contacto.
Una posterior profundizacin del tema debera incluir el anlisis de otras variables
sociodemogrficas que presentimos influyentes, como la tendencia ideolgica del alumnado,
su independencia econmica y la formacin previa que haya recibido en los temas
constitutivos de la educacin inclusiva, as como determinar la direccin de las relaciones,
tamaos de los efectos y diferencias entre subgrupos de variables.
Dado que el componente cognitivo es una de las partes integrantes y fundamentales de
la actitud, tal vez sera preciso buscar explicaciones que justifiquen por qu la diferencia de
conocimientos no se manifiesta en una diferencia equivalente de las actitudes.
Parece lgica la relacin recogida entre experiencia laboral y conocimientos, pero no
la escasa correlacin con las actitudes. Esto sugiere una clarificacin posterior, bien en la
lnea sugerida anteriormente o bien en comprobar qu aspectos de la prctica profesional
generan actitudes poco positivas hacia la educacin inclusiva.
La misma reflexin se concluye de la correlacin manifestada entre pertenencia o
participacin a ONGDs y las actitudes hacia la educacin inclusiva.
978-84-695-8363-0
911
Referencias
Cardona, M.C (2003). Mainstream teachers acceptance of instructional adaptations in Spain.
European Journal of Special Needs Education, 18(3), 311-332
Cardona, M.C. y Gmez-Canet, P.E. y Gonzlez-Snchez, M.E. (2000). Cuestionario de
Percepciones del Profesor acerca de una Pedagoga Inclusiva. Documento no
publicado, Universidad de Alicante
CERMI (2010). Manifiesto del CERMI: Por una educacin inclusiva real y efectiva.
Disponible en: http.//boletin.cermi.es/render.aspx?fichero=625
Chiner, E. y Cardona, M. C. (2013). Inclusive education in Spain: how do skills, resources,
and supports affect regular education teachers perceptions of inclusion? International
Journal of Inclusive Education, 17(5), 526-541.
Cohen. J.W. (1988). Statistical power analysis for the behavioral science. Hillsdale, NU:
Lawrence Erlbaum Associates.
Conde, A. (2012). Percepcin de la inclusin educativa en el contexto universitario: un
estudio aproximativo en la FCEE de Granada. ReiDoCrea, 1, 115-125.
Infante, M. y Gmez, V. (2004). Actitudes de los estudiantes de educacin hacia la
integracin de personas con discapacidad y hacia la educacin multicultural. Cultura y
Educacin, 16(4), 371-384.
Kerlinger, F.N y Lee, H.B. (2002). Investigacin del comportamiento. Mtodos de
investigacin en ciencias sociales. Mxico, D.F.: McGraw-Hill.
Llorent Bedmar, V. y Llorent Garca, V.J. ( 2012). La inclusin educativa desde la
perspectiva de futuros maestros en Brasil, Cabo Verde y Espaa. Revista de Educacin
Inclusiva, 5(2), 43-59.
McMillan, J.H. y Shumacher, S. (2005). Investigacin educativa. Madrid: Pearson.
Miller, K. J., Morfidi, E. y Soulis, S. (2013). Teachers' perceptions of greek special education
policies and practices. Journal of International Special Needs Education, 16(1), 53-65.
Moliner, O., Sales, A., Ferrandez, R. y Traver, J. (2011). Inclusive cultures, policies and
practices in spanish compulsory secondary education schools: teachers' perceptions in
ordinary and specific teaching contexts. International Journal of Inclusive Education,
15(5), 557-572.
Novo-Corti, I., Muoz-Cantero; J. M. y Calvo-Porral, C. (2011). Anlisis de las actitudes de
los jvenes universitarios hacia la discapacidad: un enfoque desde la teora de la
accin
razonada.
Disponible
en:
http://www.uv.es/RELIEVE/v17n2/RELIEVEv17n2_5.htm
978-84-695-8363-0
912
ONU (2006). Convencin de los derechos de las personas con discapacidad del 13 de
diciembre
de
2006.
Disponible
en:
http://www.un.org/disabilities/documents/convention/convoptprot-s.pdf
Pallant, J. (2003). SPSS survival manual. McGrau-Hill: Philadelphia.
Sandoval, M. (2009). Concepciones de los estudiantes de magisterio sobre la inclusin
educativa. Aula Abierta, 37(1), 79-88.
Savolainen, H., Engelbrecht, P., Nel, M., y Malinen, O.-P. (2012). Understanding teachers'
attitudes and self-efficacy in inclusive education: implications for pre-service and inservice teacher education. European Journal of Special Needs Education, 27(1), 5168.
UNESCO (2008). 48th. International Conference on Education: Inclusive Education: the
way
of
the
future.
Disponible
en:
http://www.ibe.unesco.org/fileadmin/user_upload/Policy_Dialogue/48th_ICE/CONFI
NTED_48-5_Conclusions_english.pdf.
Vega, A. (2008). A vueltas con la educacin inclusiva: lo uno y lo diverso. Revista de
Educacin Inclusiva, 1(1), 119-139 .
Wang, M., Zan, F., Liu, J., Liu, C. y Sharma, U. (2012). A survey study of Chinese in-service
teachers' self-efficacy about inclusive education. Journal of International Special
Needs Education, 15(2), 116.
978-84-695-8363-0
913
Resumen
Aunque la mayor parte de los nios/as dominan la lectoescritura en el primer ciclo de la
Educacin Primaria, no todos aprenden con xito estas habilidades y algunos de ellos
presentan Dificultades Especficas de Aprendizaje (DEA). La intervencin es un factor clave
en el xito de este alumnado y el profesorado desempea un papel relevante. El objetivo de
esta comunicacin fue analizar las percepciones del profesorado de Educacin Primaria
sobre una propuesta de intervenciones para el alumnado con DEA en lectura y escritura. Se
dise una escala tipo Likert con cuatro alternativas de respuesta y 10 tems referidos a una
actividad especfica o procedimiento de intervencin que el profesorado puede utilizar en el
aula. Los resultados revelaron que el profesorado consider adecuadas la mayora de estas
medidas, as como que son viables a la hora de ponerlas en prctica en el aula.
Descriptores: Dificultades especficas de aprendizaje, Lectura y escritura, Profesorado de
primaria, Intervencin.
Abstract
Most children have a good knowledge of reading and writing in primary education, but not
all of them learn these skills successfully and some children suffer on specific learning
difficulties. Teachers have an important role in the intervention which supposes a key factor
in the success of these students. The aim of this research was to analyze the perceptions of
primary education teachers on proposed interventions for students with reading and writing
of specific learning difficulties. It was designed a Likert scale with four alternative responses
and 10 items related to a specific activity or intervention procedure that teachers can use in
the classroom. The results revealed that teachers considered adequate most of these
procedures. They showed also that it is possible to put them into practice in the classroom.
Keywords: Specific learning disabilities, Reading, Writing, Primary teachers, Intervention.
Introduccin
El aprendizaje de la lectura y la escritura ocupa un lugar fundamental desde el inicio
de la escolaridad, y de manera especial, en la etapa de la Educacin Primaria (EP). Si bien, la
mayor parte de los aprenden a leer y escribir en el primer ciclo de la etapa obligatoria,
978-84-695-8363-0
914
cualquier docente sabe que el dominio de estas habilidades no finaliza en el segundo curso de
la EP. Por el contrario, para que un alumno llegue a ser competente en el lenguaje escrito
requiere de un proceso de aprendizaje sistemtico y continuo que se prolonga, generalmente,
durante toda la escolaridad. De hecho, gran parte de los esfuerzos del profesorado de la
educacin obligatoria se destinan a la intervencin en estas habilidades instrumentales. Esto
se debe a que el dominio de la lectura y la escritura es determinante en el progreso y xito
escolar de cualquier estudiante. Las consecuencias personales, sociales y educativas que para
un alumno tiene una mala adquisicin de estas habilidades podemos anticiparlas de antemano.
Situndonos en el mbito escolar, gran parte de las actividades acadmicas se apoyan en estas
habilidades instrumentales, por lo que su falta de dominio condiciona de manera desfavorable
todos los aprendizajes posteriores.
A pesar de la importancia que se concede en la educacin obligatoria al aprendizaje de
la lectura y la escritura, desde los primeros aos de la escolaridad se comienzan a marcar las
diferencias entre los estudiantes que dominan estas habilidades y aquellos que presentan
dificultades en su adquisicin. Cualquier estudiante puede presentar, a lo largo de su
escolaridad, dificultades y problemas en relacin con el aprendizaje de estas habilidades
instrumentales, sin embargo, slo son unos pocos los que, de manera sistemtica, no
responden a la intervencin. Esta resistencia a la intervencin, junto a la ausencia de
dificultades sensoriales, psquicas o emocionales, indica que estos alumnos son susceptibles
de presentar Dificultades Especficas de Aprendizaje (DEA), las cuales persisten y se
mantiene a lo largo del tiempo. Sin embargo, no siempre es fcil para un docente saber
diferenciar cundo las dificultades en la adquisicin del lenguaje escrito son debidas a un
retraso o cundo derivan de una alteracin de origen neurobiolgico como las DEA, ya que
aunque ambas comparten que el estudiante tiene bajo rendimiento y dificultades de
aprendizaje en un rea instrumental, se diferencian en su carcter especfico, su explicacin
causal y el tipo de intervencin que necesitan.
En la actualidad existe un amplio consenso en considerar que la lectura y escritura son
actividades cognitivas complejas en las que intervienen mltiples procesos cognitivos y
lingsticos. Aunque la mayor parte de estos procesos estn automatizados cuando se tiene
dominio de estas habilidades, se ha demostrado que las diferencias individuales entre los
nios con y sin DEA derivan de su grado de eficiencia en los procesos cognitivos
involucrados en las mismas. Estos procesos, en el caso de la lectura, se identifican como: (1)
perceptivos, mediante los cuales se extrae la informacin de las letras y palabras que
componen el texto; (2) lxicos, relacionados con el reconocimiento de palabras y el acceso al
significado de las mismas; (3) sintcticos, que tienen que ver con la identificacin de la
estructura gramatical de la oracin segn las reglas del lenguaje; y (4) semnticos, que hacen
referencia al significado y contenido del lenguaje (Cuetos, 2008). En el caso de la escritura,
los procesos que intervienen son: (1) motores, donde se especifican las secuencias, direccin,
tamao proporcional y rasgos de las letras; (2) lxicos, mediante los cuales se seleccionan
aquellas palabras pertinentes y adecuadas para conformar la estructura lxica; (3) sintcticos,
que proporcionan el ajuste a las reglas y estructuras gramaticales propias de la lengua en que
se escribe; y (4) planificacin, que inciden en la toma de decisiones relacionada con la
finalidad y del contenido que se pretende escribir (Cuetos, 2010). Se ha sealado que las DEA
son selectivas (Snchez, 1993), ya que no afectan a todos los niveles de procesamiento
sealados anteriormente. Al respecto, diversos estudios evidencian que las dificultades
especficas, tanto en la lectura como en la escritura, se dan principalmente en el
procesamiento lxico, es decir, el que permite el reconocimiento y el acceso al significado de
las palabras. De manera especfica, se considera que el dficit en procesamiento fonolgico,
978-84-695-8363-0
915
es la principal causa de las DEA (Stanovich, 1986; Vellutino y Scanlon, 1987). La hiptesis
del dficit fonolgico ha sido y es una de las ms aceptadas en la explicacin de las DEA,
principalmente, en la lectura o dislexia, la cual tambin ha tenido apoyo emprico en espaol
(Jimnez et al., 2005).
En esta lnea, uno de los modelos explicativos que ms consenso cientfico ha tenido
en el mbito de la adquisicin de la lectura y escritura y sus dificultades es el modelo de
Doble Ruta (Coltheart, Rastle, Perry, Langdon, y Ziegler, 2001). El apoyo a este modelo,
unido a los grandes avances que se han producido en la investigacin en el campo de las
DEA, ha posibilitado el desarrollo de importantes implicaciones educativas para intervenir
con los estudiantes que presentan DEA. Se considera que los alumnos con DEA en la lectura
y escritura requieren de intervenciones especficas relacionadas, principalmente, con la
automatizacin de los procesos lxicos (Ortiz, 2004). Por ello la intervencin debe centrarse
de manera prioritaria en actividades destinadas al desarrollo del procesamiento fonolgico y
de acceso al cdigo. La enseanza del conocimiento fonolgico mejora el rendimiento en la
lectoescritura en el alumnado que se inicia en su aprendizaje y que progresa normalmente,
pero mucho ms en el alumnado que est en riesgo de presentar DEA y en aquel que ya las
presenta. Al respecto, Jimnez y OShanahan (2008) proponen una serie de medidas a tener
en cuenta cuando se trata de la intervencin con el alumnado con DEA en lectura. Para estos
autores la intervencin debe ser sistemtica y partir de la instruccin en los elementos ms
efectivos y facilitadores de la adquisicin de la lectura, como son la conciencia fonolgica, la
manipulacin de los fonemas del lenguaje y el aprendizaje de las reglas de conversin
grafema-fonema.
Asimismo, el reconocimiento y la recuperacin automtica de los significados se
presentan como aspectos bsicos para la obtencin de un buen rendimiento en estas
habilidades. De ah que, y aun siendo el espaol una lengua con un sistema ortogrfico
transparente, sea necesario trabajar en el alumnado con DEA las representaciones ortogrficas
y fortalecer su conexin con el sistema semntico. Ello favorecer la creacin de un
vocabulario ortogrfico mnimo que facilite los procesos de recuperacin lxica e incremente
el acceso directo al significado de las palabras cuando lee o escribe (Singer y Cuadro, 2010).
Por otro lado, la relacin encontrada entre la comprensin de un texto y la velocidad y
precisin en la lectura, justifica, igualmente, que la intervencin con estos estudiantes se
centre en las estrategias cognitivas especficas relacionadas con la fluidez, el procesamiento
sintctico y semntico (Jimnez y OShanahan, 2008; Guzel-Ozmen, 2011; Santiuste, y Lpez
Escribano, 2005).
De lo anterior se deduce que, para intervenir de manera eficaz con el alumnado con
DEA, es necesario incidir en los procesos cognitivos y lingsticos que tiene alterados. Dentro
de este contexto, el profesorado juega un papel esencial, ya que son los que mantienen un
contacto directo con estos estudiantes y los que, en colaboracin con otros profesionales,
ponen en prctica la intervencin. En este sentido, es importante que el profesorado no slo
domine estrategias metodolgicas y curriculares adaptadas a la diversidad del aula, sino que,
igualmente, tenga conocimientos y ponga en prctica actividades y procedimientos de
intervencin especficos que den respuesta a las necesidades del alumnado con DEA.
Al respecto, y desde que se reconoce el trmino Dificultades Especficas de
Aprendizaje en la LOE (2006), algunas comunidades autnomas, como por ejemplo la
Comunidad Autnoma Canaria (CAC), han ido diseando y poniendo en prctica lneas de
978-84-695-8363-0
916
actuacin dirigidas a la deteccin y atencin del alumnado con DEA38. Dentro de las
actuaciones llevadas a cabo por la Consejera de Educacin, Universidades y Sostenibilidad
de la CAC, es necesario resaltar algunas acciones que se han dirigido a la intervencin del
alumnado con DEA: (1) desarrollo de normativa especfica, dentro de la cual se encuentra la
deteccin temprana y la intervencin del alumnado con DEA (Orden del 13 de diciembre de
2010); (2) orientaciones para la flexibilizacin de los criterios de evaluacin y condiciones
especiales para las pruebas escritas (Resolucin de 9 de febrero de 2011); (3) programas de
intervencin educativos dirigidos al entrenamiento del profesorado a travs de modelos de
intervencin preventivos basados en la Respuesta a la Intervencin (modelo RtI); y (4) mejora
de la formacin y eficacia del profesorado, a travs de talleres de teleformacin y cursos para
intervenir con este alumnado, as como orientaciones para el profesorado para llevar a cabo
adaptaciones metodolgicas dentro del aula con el alumnado con DEA.
Muchas de estas actuaciones dejan constancia de la importancia que tiene el
profesorado para atender a la diversidad en general, y las DEA en particular. Partiendo del
supuesto de que es el aula ordinaria el contexto natural de la intervencin y de que es el
profesor/a tutor/a quien da respuesta a las dificultades del alumnado, su rol y sus
conocimientos son determinantes. Por esta razn, no es de extraar que se propongan, desde
la administracin educativa, orientaciones para que el profesorado lleve a cabo, dentro del
aula, medidas e intervenciones con el alumnado con DEA (i.e., adaptaciones metodolgicas,
de recursos, estrategias organizativas, evaluacin).
A pesar de la importancia que tiene el profesorado en la intervencin del alumnado
con DEA, desconocemos trabajos que aborden de manera especfica qu actividades de
intervencin ponen en prctica los profesores dentro del aula con el alumnado con DEA. La
efectividad de las intervenciones no slo depende del tipo de actividades que se recomienden
para este alumnado, sino igualmente de que el profesorado la considere adecuada y la pueda
llevar a cabo dentro del aula. Dentro de este contexto, el objetivo de esta comunicacin ha
sido analizar las percepciones del profesorado de Educacin Primaria, en relacin a la
adecuacin y viabilidad, de una propuesta de intervenciones para llevar a cabo dentro del aula
con el alumnado con DEA en lectura y escritura.
Mtodo
Participantes
La muestra estuvo formada por un total de 111 profesores tutores que impartan
docencia en los niveles de 1 a 6 de la etapa de Educacin Primaria, en centros pblicos y
concertados, ubicados en zonas urbanas y suburbanas de Tenerife. La mayora de estos tutores
eran mujeres (80,2%) y slo un 19,8% eran hombres. La edad del profesorado oscilaba entre
los 22 y los 61 aos (M=46,94; DT=8,78). El 82,0% del profesorado inform que haba tenido
en su clase algn alumno/a con DEA, aunque slo el 45,0% de estos docentes manifestaron,
que en el curso actual, tenan integrados en su aula algn alumno/a con DEA en lectura y/o
escritura.
38
http://www.gobiernodecanarias.org/educacion/WebDGOIE/scripts/default.asp?IdSitio=15&Cont=48&categoria=
2909
978-84-695-8363-0
917
Instrumento
La recogida de informacin se llev a cabo a travs de la Escala de percepciones
sobre las intervenciones para alumnado con DEA en lectura y escritura. Este instrumento,
diseado ad hoc, incluye 10 tems tipo Likert con 4 alternativas de respuesta: Nada (0), Poco
(2), Bastante (3) y Mucho (4). Los tems hacan referencia a actividades o procesos de
intervencin generales, propuestos por la Consejera de Educacin, as como otros de carcter
ms especfico y que han demostrado, empricamente, su efectividad en las DEA en lectura
y/o escritura.
Procedimiento
Para proceder a la recogida de la informacin, inicialmente se estableci contacto
telefnico con varios centros de Educacin Primaria de Tenerife, en el que se les informaba
sobre los objetivos del estudio y se solicitaba su colaboracin. En todos los centros de la
muestra se procedi a: (1) entregar copias del instrumento de recogida de informacin y se
informaba nuevamente de la finalidad y modo de cumplimentacin; (2) administrar el
instrumento al profesorado que reuniera las caractersticas de la muestra; (3) por ltimo, en
aquellos centros en los que el profesorado no poda cumplimentar la escala en el momento de
su entrega, se recogieron los instrumentos una vez pasado el periodo de tiempo previamente
establecido. La recogida de informacin se realiz en el ltimo trimestre del curso 2012.
Resultados
El anlisis de los datos se llev a cabo mediante el SPSS 17.0 (Statistical Package for
the Social Sciences). Se calcularon estadsticos descriptivos (frecuencias, porcentajes y
medidas de centralizacin) para conocer la adecuacin y viabilidad de las intervenciones
presentadas para atender en el aula al alumnado con DEA en lectura y escritura.
Adecuacin de las intervenciones
El anlisis de la adecuacin de las intervenciones revel que los docentes valoraron las
propuestas presentadas como bastante adecuadas para dar respuesta, dentro del aula, a las
dificultades de los estudiantes con DEA (M=3,22). A la hora de realizar un anlisis
pormenorizado sobre las respuestas del profesorado en relacin al grado de adecuacin de
estas medidas, los resultados revelaron que la mayora de estos (96,4%), consideraron que las
propuestas ms adecuadas eran las que hacan referencia a adaptaciones en los procedimientos
de evaluacin (i.e., pruebas orales, escalas de observacin para valorar las tareas, (auto)
revisin de trabajos realizados, etc.). Asimismo, el 90% del profesorado valor que otra de
las medidas de evaluacin ms adecuada era flexibilizar el tiempo que se permite a un alumno
con DEA cuando tienen que realizar pruebas de evaluacin que impliquen la utilizacin de la
lengua escrita.
Las adaptaciones de tipo metodolgico son, igualmente altamente valoradas como
adecuadas para llevar a cabo con los estudiantes con DEA. As por ejemplo, el 94,6% del
profesorado opin que proporcionar apoyos visuales, cuando el alumno/a est realizando las
tareas en clase, es una de las estrategias didcticas ms adecuada. En esta lnea, la
presentacin gradual o por tareas de cada una de las actividades, as como la supervisin de
las mismas, es otra de las medidas de intervencin mejor valoradas por los docentes (91%).
978-84-695-8363-0
918
Sin embargo, las propuestas especficas para intervenir en las DEA son las que un
menor porcentaje de tutores consideraron adecuadas para dar respuesta a este alumnado. En
este sentido, la estrategia de lecturas repetidas, la cual ha demostrado su eficacia en la mejora
de la fluidez lectora del alumnado con DEA, fue considerada adecuada por el 63,9% del
profesorado. Asimismo, los procedimientos de intervencin destinados a la automatizacin de
los procesos lingsticos son, segn opinin de estos tutores una de las medidas menos
adecuadas dentro de las propuestas presentadas. Slo, aproximadamente, la mitad de los
profesores (53,1%) consideraron que las medidas destinadas al dominio de los patrones
motores y ortogrficos, son adecuadas para intervenir con los estudiantes con DEA en
escritura.
Viabilidad de las intervenciones
Por otra parte, cuando se analiz la viabilidad para llevar a cabo dentro del aula las
intervenciones presentadas, el profesorado consider, a nivel general, que estas propuestas
eran bastante viables (M=3,06). El anlisis de los resultados de la viabilidad de cada una de
las medidas, puso de manifiesto que no todas las propuestas que se consideraron adecuadas
eran, en la misma proporcin, viables para llevar a cabo con el alumnado con DEA en el aula.
De las medidas propuestas, el profesorado (84,6%) opin que las adaptaciones de los
procedimientos de evaluacin son las ms viables, as como dejar a estos alumnos/as ms
tiempo para realizar pruebas de evaluacin que requieran leer y escribir (79,2%).
Las medidas de intervencin metodolgicas, aunque fueron valoradas por la mayor
parte del profesorado como bastante adecuadas, un menor porcentaje de estos docentes las
consideradas como viables. Los docentes sealaron que las propuestas de intervencin, de
mayor a menor viabilidad, son: ofrecer apoyos visuales (68,5%), proporcionar gradualmente
las instrucciones mientras realizan las tareas (64,8%), as como las intervenciones dirigidas al
afianzamiento de las reglas de conversin grafema-fonema (62,9%).
Por ltimo, al que igual que sucede cuando se analiz la adecuacin, las propuestas
relacionadas con las intervenciones especficas para abordar las dificultades de estos
estudiantes, son las que una mayor proporcin del profesorado consider poco o nada viables.
De hecho, el 60,3% del profesorado valor que la estrategia de lecturas repetidas es poco o
nada viable para poner en prctica en su aula. La misma tendencia se observ cuando se pidi
a los docentes que valoraran el grado de viabilidad de las tareas relacionadas con la
automatizacin de habilidades motoras y ortogrficas (59,5%).
Conclusiones
Los resultados de este estudio permiten obtener una radiografa sobre las actividades
de intervencin que los docentes no slo consideran adecuadas, sino que adems valoran
como viables para implementar en el aula.
Mientras que las medidas relacionadas con la adaptacin del proceso de evaluacin o
la metodologa son percibidas como las ms adecuadas y viables por estos docentes, las
intervenciones especficas relacionadas con actividades de instruccin directa para los
procesos implicados en la lectura y/o escritura, son valoradas como menos adecuadas y
viables. Probablemente esta valoracin viene derivada de la necesidad de dedicar un tiempo
especfico dentro del horario a realizar estas tareas de entrenamiento especfico, mientras que
978-84-695-8363-0
919
978-84-695-8363-0
920
Vellutino, F.R., and Scanlon, D.M. (1987). Phonological coding, phonological Awareness and
reading ability: Evidence from a longitudinal and experimental Study. Merrill-Palmer
Quarterly, 33, 321-363.
978-84-695-8363-0
921
Resumen
Las creencias de las personas con discapacidad intelectual acerca de sus posibilidades
laborales pueden estar condicionadas por aquellas expectativas de las personas de su
entorno (e.g., familias y profesionales). La interiorizacin de estas creencias puede limitar
significativamente el desarrollo de su potencial al generar una acomodacin de la persona a
tales expectativas. Mediante un enfoque cuantitativo y un diseo no experimental descriptivo
se recogieron las creencias y percepciones de 60 personas con discapacidad intelectual
pertenecientes a una Asociacin de Alicante (Comunidad Valenciana) a travs de encuesta,
entrevista en profundidad y grupo de discusin. Los resultados indican: (a) la expectativa de
que conseguirn empleo, (b) su preferencia por entornos normalizados, y (c) la percepcin de
ideas en su entorno que limitan su desarrollo, incluso en sus propias familias. Las
implicaciones prcticas se relacionan con la necesidad de realizar una orientacin
profesional tanto con la persona con discapacidad como con su familia, y formar al alumno
con discapacidad intelectual para su autodeterminacin.
Descriptores: Discapacidad intelectual, Empleo, Expectativas.
Abstract
The beliefs of people with intellectual disabilities about their employability may be
constrained by those expectations from people in their environment (eg, families and
professionals). The internalization of these beliefs may significantly limit the development of
their potential to generate an accommodation of the person to such expectations. Using a
quantitative approach and a non experimental descriptive design beliefs and perceptions
were collected from 60 people with intellectual disabilities belonging to an Association of
Alicante (Valencia) through survey, in-depth interview and discussion group. The results
indicate: (a) they believe and expect they will access employment, (b) they prefer normal
environments, and (c) there are perceptions and ideas in their environment that limit their
development, even in their own families. The practical implications are related to the need for
professional guidance to both the disabled person as to his family, and train students with
intellectual disabilities to self-determination.
Keywords: People with intellectual disabilities, Employment, Expectations.
978-84-695-8363-0
922
Introduccin
Desde siempre, la vida en sociedad de las personas con discapacidad intelectual ha
estado marcada por la segregacin y la marginalidad. Las formas de exclusin han sido
diversas: eliminacin (muerte), abandono, segregacin, marginacin y/o discriminacin
(Ravaud y Stiker, 2001). Esta forma de actuacin empez a modificarse hace slo unas
dcadas. Las actuales visiones de la discapacidad ofrecen nuevas posibilidades para el
desarrollo del potencial de estas personas, si bien estas iniciativas emprendidas siguen
topando con obstculos importantes (e.g., discriminacin en el empleo, bajas expectativas
hacia sus posibilidades de autonoma personal). Existen una serie de trabas o impedimentos
que dificultan el poder avanzar hacia el empleo de las personas con discapacidad. Algunos de
estos impedimentos son: (a) factores asociados a la educacin y formacin que reciben, (b)
factores relativos a las modalidades de acceso al empleo, y (c) las creencias y percepciones
que se tienen sobre las posibilidades laborales de estas personas.
Las creencias del entorno social acerca de las posibilidades de acceso al empleo de la
persona con discapacidad intelectual constituyen uno de los factores involucrados en el
desarrollo de las destrezas laborales (Fitzgerald y Betz, 1994; Vondracek y Schulenberg,
1992). Estas ideas de los dems, a su vez, afectan a las creencias que sobre s misma elabora
la propia persona (Lent y Hackett, 1994). De este modo e inconscientemente, las bajas
expectativas hacia el individuo con discapacidad son el punto de partida de un crculo vicioso
que limita significativamente sus posibilidades (OBrien, 1985). Para romper esta tendencia
resulta crucial identificar y modificar las creencias, muchas veces errneas, sobre sus
posibilidades de desarrollo (Barton, 2009; Caleidoscopia, 1996; OMS, 2011; Valls, Vil, y
Pallisera, 2004). En este sentido, la Organizacin Mundial de la Salud (OMS) advirti que
uno de los factores de discriminacin ms importantes en el empleo de la personas con
discapacidad intelectual son las creencias de su entorno (OMS, 2011).
Las personas con discapacidad intelectual conviven con las creencias y percepciones
acerca de sus posibilidades laborales que provienen, entre otros, de sus familias, de los
profesionales pertenecientes a los centros a los que asisten, de otras personas con
discapacidad, y de ellos mismos. Estas expectativas ajenas condicionan sus autoexpectativas
y, como resultado, sus posibilidades de desarrollo (Lent y Hackett, 1994). OBrien (1985)
alert de que la presencia de bajas expectativas en el contexto poda provocar una reduccin o
privacin de oportunidades y, por lo tanto, un empeoramiento progresivo de su
funcionamiento competencial. Un momento clave parece ser la adolescencia. Este es el
periodo en el que el individuo transita desde la pubertad hacia la juventud, pero tambin el
momento en el que comienzan a resultar evidentes los obstculos para el ejercicio de un rol
adulto, lo cual puede provocar un importante estrs familiar (Glidden y Johnson, 1999). Pese
a la identificacin de estos y otros aspectos del entorno familiar, se han realizado pocos
estudios para comprender e interpretar bien este fenmeno (Ferguson, 2001), especialmente
en el mbito espaol.
Respecto de las perspectivas de investigacin, apenas existen trabajos en los que se
incluya la voz de las propias personas con discapacidad y, ms an, en muy pocas ocasiones
suele realizarse mediante estrategias cualitativas, tales como la entrevista en profundidad o los
grupos de discusin (Pallisera, 2003). En este estudio se describen las creencias y
percepciones que las personas con discapacidad intelectual tienen sobre sus posibilidades
laborales con el propsito de conocer sus puntos de vista y proponer estrategias para mejorar
978-84-695-8363-0
923
978-84-695-8363-0
924
978-84-695-8363-0
925
978-84-695-8363-0
926
parece ser especialmente destacada en el caso de la madre, que resulta ser la clave de la
sobreproteccin en el entorno familiar. Por ltimo, expresaron la creencia de que, en
ocasiones, las familias pueden tambin expresar expectativas maximizadas respecto de sus
posibilidades, lo cual puede resultar en una situacin que frustracin y ansiedad hacia el
sujeto con discapacidad.
En funcin de las conclusiones indicadas, se realizan las siguientes recomendaciones
prcticas: (a) realizar una orientacin profesional diferencial tanto con la familia como con la
persona con discapacidad intelectual desde la escuela, (b) incidir en el autoconocimiento del
sujeto con discapacidad y en el desarrollo de unas expectativas laborales ajustadas a las
posibilidades reales del individuo y del entorno laboral, (c) realizar una evaluacin funcional
peridica de las destrezas y del potencial laboral del individuo, de cara a fundamentar el tipo
de orientaciones que se realicen, y (d) involucrar a la persona en la toma de decisiones
respecto de su propia vida.
Segn lo indicado, cabe resaltar la necesidad de continuar trabajando para lograr una
inclusin de las personas con discapacidad en los diversos entornos sociales, incidiendo
especialmente en el entorno laboral, debido a las repercusiones que ste tiene en la vida del
individuo.
Referencias
Albert Gmez, M. J. (2007). La investigacin educativa. Claves tericas. Madrid: McGraw
Hill.
Barton, L. (2009). Estudios sobre discapacidad y la bsqueda de la inclusividad.
Observaciones. Revista de Educacin, 349, 137-152.
Caleidoscopia (1996). Factores personales y sociales de la integracin laboral de las
personas con discapacidad. Madrid: Real Patronato de Prevencin y Atencin a
Personas con Minusvala.
Ferguson, P. M. (2001). Mapping the family: disability studies and the exploration of parental
response to disability. En G. L. Albrecht, K. D. Seelman y M. Bury (Eds.), Handbook
of disability studies (pp. 373-395). Londres: SAGE.
Fitzgerald, K. F., y Betz, N. E. (1994). Career development in cultural context: The role of
gender, race, class and sexual orientation. En M. L. Savickas y R. W. Lent (Eds.),
Convergence in career development: Implications for science and practice (pp. 103117). Palo Alto: CPP.
Glidden, L. M., y Johnson, V. E. (1999). Twelve years later: adjustment in families who
adopted children with developmental disabilities. Mental Retardation, 37(1), 16-24.
Gmez Puerta, J. M., y Cardona Molt, M. C. (2008b). Creencias y Percepciones sobre las
Posibilidades Laborales de las Personas con Discapacidad Intelectual. Versin para
personas con discapacidad intelectual (no publicado).
Lent, R. W., y Hackett, G. (1994). Sociocognitive mechanisms of personal agency in career
development: Pan theoretical prospects. En M. L. Savickas y R. W. Lent (Eds.),
978-84-695-8363-0
927
Convergence in career development: Implications for science and practice (pp. 77101). Palo Alto: CPP.
O'brien, J. (1985). Dignificacin de las personas e integracin en la comunidad en los
programas de atencin. Siglo Cero, 102, 51-60.
OMS [Organizacin Mundial de la Salud] (2011). Informe mundial sobre la discapacidad.
Malta: Autor.
Pallisera Daz, M. (2003). Capacidad intelectual lmite e integracin laboral: desde la
relatividad conceptual al anlisis de las experiencias integradoras. Bordn, 55(4), 555568.
Ravaud, J. F., y Stiker, H. J. (2001). Inclusin/Exclusin. An analisis of historical and cultural
meanings. En G. L. Albrecht, K. D. Seelman y M. Bury (Eds.), Handbook of disability
studies (pp. 490-512). Londres: SAGE.
Vondracek, F. W., y Schulenberg, J. (1992). Counseling for normative and nonnormative
influences on career development. Career Development Quarterly, 40, 291-301.
978-84-695-8363-0
928
Resumen
El estudio evala las opiniones que poseen estudiantes de educacin primaria y secundaria
(N = 339) sobre las actitudes y comportamientos instructivos del profesorado de centros
educativos de Chile que escolarizan a nios y jvenes extranjeros. Para ello, se emple la
Escala de Actitud y Comportamiento del Profesorado ante la Diversidad (Sanhueza, Cardona
y Friz, 2010), cuyo anlisis factorial exploratorio agrupa 12 tems en dos factores
permitiendo distinguir entre Actitud de Respeto y Trato Justo del Profesor con 4 tems y
Comportamiento Instructivo del Profesor con cuatro. Los resultados revelan que los
respondientes perciben en sus profesores actitudes y comportamientos inclusivos y valoran
principalmente el respeto y la escucha atenta. Las principales dificultades estn asociadas a
la falta de empata de parte de los profesores y la percepcin de no recibir un trato
igualitario que tienen los alumnos inmigrantes.
Descriptores: inclusin, diversidad, cultural, actitudes, comportamiento instructivo.
Abstract
The study assesses the opinions of primary and secondary education students (N = 339) on
the attitudes and instructional behavior of chilean school teachers at schools enrolling
foreign children and young students. For this, we used the Attitude and Behavior Scale for
Teachers facing Diversity (Sanhueza, Cardona and Friz, 2010), whose exploratory factor
analysis groups 12 items on two factors enabling the distinction between Attitude of Respect
and Fair Dealing of the Teachers and 4 items for Teacher Instructional Behavior. The results
reveal that the respondents perceived their teachers attitudes and behavior as inclusive and
greatly value their respect and attention. The main difficulties are associated with the lack of
empathy from teachers and immigrants students having the perception of not receiving equal
treatment as native students.
Keywords: inclusion, diversity, culture, attitudes, instructional behavior.
39
El trabajo presenta resultados del Proyecto FONDECYT N 11110203 titulado Evaluacin de la Sensibilidad
Intercultural en alumnos (as) de Educacin Bsica y Media de aulas culturalmente diversas: diagnstico y
desafos para el sistema educativo en Chile financiado por la Comisin Nacional de Investigacin Cientfica y
Tecnolgica de Chile.
978-84-695-8363-0
929
Introduccin
Desde las dcadas de los ochenta y sobre todo de los noventa, se han consolidado
nuevas pautas migratorias vinculadas con los acontecimientos que cambiaron los parmetros
de las relaciones internacionales existentes hasta el momento, hechos que han contribuido a
que los movimientos de poblacin asuman un nivel de globalizacin nunca visto en la historia
(Alcaiz, 2006). De esta manera, las formas de relaciones econmicas, polticas y sociales
emergentes estn cambiando las pautas de movilidad y los procesos de asentamiento. Un
rasgo caracterstico es el incremento del nmero de inmigrantes, que ya no es exclusividad de
pases desarrollados sino que afecta a casi todas las zonas del planeta. Particularmente, Chile
se ha convertido en uno de los polos ms atractivos para los inmigrantes sudamericanos,
segn el informe de 2008 sobre las Inmigraciones en el mundo, Chile es el cuarto destino
preferido por los inmigrantes del Cono Sur, despus de Argentina, Brasil y Venezuela y, de
acuerdo a los datos del Departamento de Asuntos Econmicos y Sociales (DAES) de la ONU,
la CEPAL y el Departamento de Extranjera y Migracin del Ministerio del Interior, es donde
ms ha crecido la inmigracin en Sudamrica. Se trata de poblacin esencialmente de origen
sudamericano (73%). Dentro de este grupo se destaca la poblacin de origen fronterizo, que
agrupa a ms del 61% del total de inmigrantes, siendo especialmente relevante la comunidad
peruana, que tiene mayor representatividad con un 37,1% del total, la comunidad argentina
con un 17,2% y la boliviana con un 6,8% (Ministerio del Interior de Chile, 2008). Este
fenmeno, pone frente a Chile una serie de desafos, los que por un lado se relacionan con la
capacidad del pas para acoger y brindar condiciones adecuadas para que la poblacin
inmigrante desarrolle su vida dentro de las fronteras. Por otra parte, existen una serie de
elementos vinculados con la capacidad de administrar los aspectos relacionados con la
convivencia entre chilenos y extranjeros. Esta ltima tarea puede en gran medida ser aborda
por las polticas pblicas en educacin. Para Norambuena (2004) urge una poltica migratoria
clara, con dos componentes principales: que les ofrezca a los inmigrantes condiciones
laborales, de salud y de educacin dignas y, en segundo lugar, que se elabore una poltica
educativa y cultural que prepare al chileno para la convivencia con personas que tienen
formas de vida diferentes.
Segn datos pblicos aportados por el Sub-secretario del Interior Felipe Harboe (2010)
cuando se compara la calidad de la educacin de los pases de origen de los extranjeros con la
educacin ofertada en Chile, existen altos niveles de valoracin en general indicando que la
calidad de la educacin es superior a la recibida en sus pases de origen (88%). Peruanos
(mayor conglomerado inmigrante en Chile) y Bolivianos indican que la educacin recibida en
Chile es mejor que la de su pas de origen y slo el conglomerado Colombiano presenta una
evaluacin negativa relativamente alta (25%) sobre la educacin recibida en el pas. A pesar
de que el tema de calidad, pudiera ser interpretado como positivo, estudios realizados
recientemente por UNICEF (2004) sobre prcticas discriminatorias sealan que el 46% de las
nias y nios adolescentes chilenos consideraba que una o ms nacionalidades eran inferiores
que la chilena y las nacionalidades vistas ms negativamente son la peruana (32%), boliviana
(30%) y argentina (16%). Este dato no es menor si se considera la configuracin demogrfica
de la poblacin inmigrante en el territorio chileno, lo que hace necesario generar nuevas
explicaciones desde una mbito psicosocial, particularmente desde los centros educativos
como espacios donde profesores y estudiantes llevan a cabo la integracin (o no) de nios y
jvenes inmigrantes.
978-84-695-8363-0
930
978-84-695-8363-0
931
Contexto y participantes
Por sus caractersticas geogrficas Chile concentra bsicamente dos polos de
agrupamiento de poblacin inmigrante. La primera, es el norte del pas (regin de Arica y
Parinacota) que agrupa a la poblacin fronteriza estando representados conglomerados
peruanos, colombianos y bolivianos principalmente. En segundo lugar, la poblacin
inmigrante se concentra en la capital Santiago de Chile (zona centro del pas) debido a su
actividad comercial y productiva que atrae a extranjeros que buscan insertarse en el mundo
laboral. Precisamente el estudio se llevo a cabo en esta ltima zona donde la poblacin
extranjera ms representativa es peruana. La muestra definitiva (N = 339) qued constituida
por 108 alumnos extranjeros (32%) y 231 chilenos (68%) de tres establecimientos educativos
de entre 6 y 17 aos, encontrndose representadas las nacionalidades de Argentina (3%)
Bolivia (3%), Colombia (5%), Ecuador (4%), Per (17%), entre los ms significativos. La
distribucin por gnero es de 48% de varones y un 52% de mujeres. Cuando se les consulta
por su experiencia con personas de diferentes culturas, un alto porcentaje seala que comparte
juegos (88%) y que se siente aceptado por sus compaeros (91%) y profesores (92%).
Variables e instrumento
Las actitudes y comportamiento del profesorado se midieron mediante un cuestionario
diseado por Sanhueza, Cardona y Friz (2010) que constaba de dos partes. La parte I contena
variables demogrficas: curso, edad, gnero, pas de procedencia, aos de permanencia en
Chile, conocimiento de una segunda lengua y experiencia intercultural. La parte II inclua la
Escala de Actitud y Comportamiento del Profesorado ante la Diversidad, a cuyos 16
reactivos se responda expresando el grado de acuerdo utilizando una escala tipo Lickert
(1=No es cierto, 2= A veces es cierto, 3= Bastantes veces es cierto, 4= Siempre es cierto).
Luego de un anlisis psicomtrico del instrumento se obtuvo en la prueba de
esfericidad de Barlett 2(148) =735.21; p <.000 considerado como muy bueno para el estudio
al igual que la prueba de adecuacin de la muestra de Kaiser-Meyer-Olkin (KMO= .912). Los
anlisis de fiabilidad como consistencia interna arrojan un Alpha de Cronbach de .89, lo que
implica que las puntuaciones tienen un error muy pequeo y son altamente fiables.
Posteriormente, se emple el mtodo de componentes principales como mtodo de
extraccin de factores con autovalores mayores a la unidad obteniendo una solucin factorial
de dos factores que explican el 52% de la varianza: Actitud de Respeto y Trato Justo del
Profesor (41.43%) con 12 tems y Comportamiento Instructivo del Profesor (11.01%) con
cuatro. En la rotacin varimax, se observa que todas las variables quedan bien representadas
con valores de la comunalidad que van desde 0.5 a 0.8 con una carga relativamente
homognea. Los dos factores encontrados responden a diferentes dimensiones que quedan
definidas por las variables que las integran:
Factor I Actitud de Respeto y Trato Justo del Profesor
Este factor integra un conjunto de actitudes positivas del profesor hacia el alumnado,
donde destacan habilidades personales como el respeto, saber escuchar, ser justo, emptico.
Todas estas caractersticas del profesor son consideradas como facilitadores de la
comunicacin intercultural.
978-84-695-8363-0
932
Factor II
Factor I
Tabla 1
Distribucin de variables segn factores, peso factorial, comunalidades
y proporcin de la varianza explicada
Pesos Factoriales
.81
.93
.74
.82
.64
.70
.68
.68
.65
.64
.64
.64
41.43%
.86
.91
.73
.69
11.01%
Comunalidades
0.8
0.7
0.6
0.6
0.6
0.6
0.5
0.8
0.6
0.5
0.5
0.6
0.6
0.7
0.6
0.5
978-84-695-8363-0
933
En relacin con las actitudes del profesorado, los participantes perciben en sus
profesores actitudes y comportamientos inclusivos y valoran principalmente el respeto y la
escucha atenta. Las principales dificultades estn asociadas a la falta de empata de parte de
los profesores y la percepcin de no recibir un trato igualitario que tienen los alumnos
inmigrantes.
Respecto de las metodologas de trabajo, los respondientes manifiestan que quienes
requieren atencin individualizada, la reciben y que sus profesores gestionan todos los
recursos posibles para apoyar el aprendizaje. La normalizacin en la atencin educativa al
alumnado inmigrante hace imprescindible una formacin especfica, destinada a que los
profesores cuenten con competencias adecuadas para dar una respuesta educativa satisfactoria
a este tipo de alumnado.
Referencias
Areizaga, E. (2001). Cultura para la formacin de la competencia comunicativa intercultural:
el enfoque formativo. Revista de Psicodidctica, 11(12), 157- 170.
Bartolom, M. (2004). Educacin intercultural y ciudadana. En La formacin del
profesorado en educacin intercultural (93-122). Espaa: Ministerio de Educacin,
Secretaria General Tcnica.
Daz Aguado (2006). Convivencia escolar y gnero. Andaluca Educativa, 53, 7-10.
Edwards, M. y Lpez, S. (2008). Competencias comunicativas e interculturales y reforma
curricular en el marco de la convergencia europea. Revista complutense de educacin,
19(2), 369-384.
Essomba, M.A. (1999). Construir la escuela intercultural: reflexiones y propuestas para
trabajar la diversidad tnica y cultural. Barcelona: Gra.
Essomba, M. (Coord.). (2006). Construir la escuela intercultural. Reflexiones y propuestas
para trabajar la diversidad tnica y cultural. 6 ed. Barcelona: Editorial GRA.
Gay, L. R. y Airasian, P. (2000). Educational Research: Competencies for Analysis and
Application. Merrill/Prentice Hall.
Medina, A. y Domnguez, C. (2006). La formacin del profesorado ante los retos de la
interculturalidad, en Medina, A., Rodrguez, A. e Ibez, A. (Coord.),
Interculturalidad, formacin del profesorado y educacin (captulo 3), Madrid:
Pearson Prentice Hall.
Sanhueza, S. y Cardona, S. (2009). Evaluacin de la sensibilidad intercultural en alumnado de
educacin primaria escolarizado en aulas culturalmente diversas. Revista de
Investigacin Educativa RIE, 27(1), 247-262.
Soriano Ayala, E. (coord) (2001). Identidad cultural y ciudadana intercultural. Su contexto
educativo. Madrid, La Muralla.
978-84-695-8363-0
934
978-84-695-8363-0
935
Resumen
El presente trabajo analiza las diferencias de frecuencia de uso de las tecnologas de la
informacin y la comunicacin (TIC) por aos de docencia en una muestra de 703 docentes
de 21 a 65 aos (edad media = 36.6 aos) de educacin infantil y primaria. El instrumento
utilizado fue un cuestionario elaborado ad hoc que analiza el uso y la percepcin de las TIC.
Los resultados sealan que el grupo de docentes con mayor experiencia (16-42 aos) utiliza
en menor medida las TIC tanto en su prctica pedaggica como en tareas administrativas o
de comunicacin con otros docentes o familias. Un anlisis pormenorizado seala que estos
docentes usan en menor medida soportes informticos como ordenadores, porttiles y
pantalla digital, recursos como internet o programas educativos o software y los medios
digitales en su prctica pedaggica. Adems, utilizan tambin en menor medida las TIC para
comunicarse con otros docentes y las familias.
Descriptores: Tecnologas de la informacin y comunicacin, maestros, experiencia docente.
Abstract
This paper analyzes the differences in frequency of use of information and communication
technology (ICT) for teaching experience in a sample of 703 teachers from 21 to 65 years
(mean age = 36.6 years) pre-school and primary education. The instrument used was an ad
hoc questionnaire that analyzes the use and perception of ICT. The results show that the
group of teachers with more experience (16-42 years) uses ICT to a lesser extent in both
teaching practice and in administrative tasks or communication with other teachers or
families. A more detailed analysis shows that these teachers use less format such as PCs,
laptops and digital display, and internet resources or programs such as educational software
and digital media in their teaching practices. Also, they use less ICT to communicate with
other teachers and families.
Keywords: Information and communication technology, teachers, teaching experience.
Introduccin
Los distintos gobiernos europeos a partir de la propuesta eEurope tienen como
objetivo fundamental el desarrollo de una sociedad de la informacin para todos. El programa
eLearning, aprobado en el Consejo Europeo de Lisboa en el ao 2000 por la Unin Europea,
978-84-695-8363-0
936
favorece y promueve esta propuesta estableciendo como prioritarias todas aquellas polticas
educativas que contribuyan al desarrollo de las Tecnologas de la Informacin y la
Comunicacin (TIC) en los distintos contextos educativos.
En nuestro pas, la Ley Orgnica de Educacin (LOE, 2006) contempla dentro del
currculum la competencia bsica del Tratamiento de la Informacin y Competencia Digital
siendo obligatorio su aprendizaje a lo largo de toda la escolaridad en los distintos niveles y
etapas. Por su parte, la European Commission (2006) aporta numerosos estudios
internacionales que analizan la implementacin e incorporacin de las TIC en los centros
educativos destacando la mayor presencia de ordenadores y acceso a internet en los centros y
un mayor uso por parte del profesorado y del alumnado en los ltimos aos. Pero, tal y como
sealan algunas investigaciones (Balnskat, Blamire y Kefala (2006), una mayor presencia y
uso de las TIC en los contestos escolares no garantiza mejoras en la prctica docente
apostando por mtodos pedaggicos ms innovadores ni garantiza una transferencia directa en
las mejoras de los aprendizaje de los alumnos. Por tanto, no podemos concluir que la simple
presencia de las TIC en los centros docentes y el uso de las mismas por parte de los docentes
generan cambios en los mtodos pedaggicos ms tradicionales.
Algunos estudios muestran que el modelo de enseanza que comparten profesores y
alumnos utilizando las TIC sigue siendo expositivo y de transmisin de informacin por lo
que no supone un cambio o innovacin significativa del modelo de enseanza tradicional
(Area, 2008). Por otro lado, los estudios realizados por Aznar, Fernndez e Hinojo (2003)
mostraron la actitud poco favorable desarrollada por los docentes hacia el uso de las TIC
como recurso educativo. An con esta realidad, las caractersticas de la sociedad en la que nos
encontramos, una sociedad caracterizada por la cada vez mayor presencia y uso de las TIC,
hace que la escuela y los docentes no puedan quedarse al margen de los cambios tecnolgico
y de las nuevas competencias a desarrollar en el alumnado. En este sentido, la Comunidad
Valenciana con competencia plena en materia educativa, a travs de la Resolucin de 14 de
diciembre de 2012 de la Direccin General de Innovacin y Poltica Lingstica estableci
dentro su Plan Anual de Formacin Permanente de Profesorado como lnea prioritaria la
incorporacin y aumento de la presencia de las TIC en los procesos de enseanza-aprendizaje.
Por tanto, en la formacin del profesorado en activo de todos los niveles y especialidades
considera que el desarrollo de esta competencia profesional es uno de los factores ms
importantes para la actualizacin cientfico-didctica de los docentes avanzando en la misma
direccin que su desarrollo en el resto de la sociedad. Por tanto, uno de los principales
objetivos del desarrollo del Plan Anual de Formacin es que el profesorado conozca e integre
las herramientas TIC existentes en su labor educativa, incidiendo en su aplicacin en el aula y
su integracin en el currculo. Por tanto, podemos concluir que la incorporacin de las TIC es
considerada como un aspecto fundamental para perfeccionar el sistema educativo y dar
respuesta a las demandas sociales. Pero esta integracin, tal y como seala Marqus (2008),
tiene varios niveles: 1) como instrumento para la gestin administrativa y tutorial, 2) como
alfabetizacin en TIC y su uso como instrumento de productividad, 3) como aplicacin de las
TIC en cada una de las reas o asignaturas y 4) como uso de las TIC como instrumento
cognitivo y para la integracin y colaboracin grupal.
Partiendo de este esta realidad el objetivo del presente estudio fue realizar un
diagnstico de la situacin referido a la frecuencia de uso de las TIC en docentes de infantil y
primaria en funcin de los aos de experiencia profesional. Los resultados obtenidos nos
permitirn reflexionar sobre el uso de las TIC en la escuela teniendo en cuenta los distintos
978-84-695-8363-0
937
Sexo
Hombres
39
87
23
149
Total
Mujeres
190
294
70
554
229
381
93
703
Instrumentos
El instrumento utilizado en el estudio ha sido un cuestionario elaborado ad hoc que
analiza el uso y la percepcin de las TIC que tienen los docentes (Gomis, Delgado, Gonzlez,
Jover, Len y Snchez, 2012). El cuestionario consta de 14 preguntas cerradas de carcter
cuantitativo que se responden a travs de escalas tipo Likert de 5 puntos (1=nunca, 5=siempre
y 1=nada, 5=mucho). Adems el cuestionario tambin recoge la frecuencia de uso de las TIC
(diaria, semanal, quincenal, trimestral) por parte de los docentes en el contexto personal y
laboral.
Procedimiento
La aplicacin del cuestionario se realiz segn el procedimiento de consentimiento
informado. En primer lugar, se inform a los participantes de cmo responder a las distintas
preguntas y, en segundo lugar, se administr el cuestionario de forma individual, annima y
voluntaria quedando en todo momento resguardado el derecho a la confidencialidad.
Anlisis de datos
La evaluacin de los datos se realiz mediante anlisis descriptivos y anlisis de
varianza (ANOVA). Para identificar entre qu grupos de experiencia docente se encontraban
las diferencias significativas se efectuaron pruebas post hoc (Prueba Scheff). Para efectuar
estos anlisis se utiliz el programa SPSS19.0.
978-84-695-8363-0
938
Resultados
Uso de las TIC por parte de los docentes
La Tabla 2 muestra la prevalencia sobre el uso de las TIC en los docentes. Aunque en
general los docentes usan las TIC en su prctica pedaggica en un 68% entre algunas
ocasiones o siempre existen preferencias en este uso en funcin del tipo de recurso TIC
utilizado y el fin para el que ste se utilice. Po otro lado, otro dato destacable es que alrededor
de un 50% del profesorado no utiliza la sala de ordenadores, ni la pizarra digital (PDI), ni el
ordenador porttil en el aula y tampoco usa las TIC para comunicarse con las familias. Sin
embargo, el uso es muy frecuente en el caso de la cmara de fotos, de vdeo y de la televisin.
El mayor uso de las TIC es como herramienta para la realizacin de tareas administrativas del
centro y en menor medida como recurso para la comunicacin con otros docentes y con las
instituciones.
Tabla 2
Uso de las TIC por el profesorado
Un anlisis detallado sobre este uso en funcin de los aos de experiencia docente nos
indica que un 13,9% y un 12,4% de los docentes de entre 6 y 15 aos y 16 y 24 aos de
experiencia respectivamente no utilizan nunca las TIC mientras que este porcentaje disminuye
a un 5,3% en el caso de los docentes de menor experiencia (entre 1 y 5 aos). En cuanto al
uso diario de las TIC los docentes entre 1 y 5 aos y entre 6 y 15 aos de experiencia
muestran un uso muy similar de 26,6% y un 28,5% respectivamente, mientras que los
docentes de mayor experiencia (16-42 aos) muestran un uso diario menor con un 18,9% de
los casos. Por otro lado, las prevalencias de uso semanal son muy similares en los tres grupos
siendo de un 43,1% en el caso de docentes con una experiencia de entre 1 y 5 aos, de un
37,2% en el caso de docentes entre 6 y 15 aos y un 42,6% en docentes con una experiencia
de entre 16 y 42 aos. El uso mensual que hacen de las TIC es mayor en el caso de docentes
entre 1 y 5 aos de experiencia con un 29,9% mientras que este porcentaje disminuye en el
978-84-695-8363-0
939
caso de docentes con mayor experiencia con un porcentaje similar del 14,9% y 14,2% en el
caso de docentes entre 6 y 15 aos y 16 y 42 aos de experiencia, respectivamente. El uso
trimestral de las TIC es muy similar entre docentes entre 1 y 5 aos y 6 y 15 aos con 4,4% y
5,5% mientras que este valor es superior en el caso de docentes con mayor experiencia, entre
16 y 42 aos con un 11,8%.
Diferencias de uso de las TIC segn los aos de experiencia docente
El anlisis de varianzas (ANOVA) seala que las diferencias de uso de las TIC es
significativo en funcin de los aos de experiencia docente (Tabla 3). La prueba de
comparaciones mltiples (Scheff) seala que las diferencias de medias son significativas a
nivel (p<0,01) entre el grupo de docentes con mayor experiencia (16-42 aos) y los dems
grupos de docentes siendo el nivel de significatividad de la diferencia con el grupo de
docentes con una experiencia de entre 1 y 5 aos de p=0,01 y con el grupo de docentes con
una experiencia de 6 a 15 aos de p=0,05. El mismo anlisis nos muestra que no existen
diferencias significativas entre los grupos de docentes que tienen experiencia docente entre 1
y 15 aos (p= ,624).
Tabla 3
Diferencias de uso en funcin de los aos de experiencia
Uso de las TIC
M
D.T.
Aos de docencia
1-5 aos (n = 225)
6- 15 aos (n = 309)
16-42 aos (n = 169)
F
p
33,08
32,31
29,59
7,765
,000
8,55
9,43
8,89
1-5 aos
M
D.T.
3,17
,95
6-15 aos
M
D.T.
2,98
1,05
16-42 aos
M
D.T.
2,76
1,03
7,98
,00
2,56
,93
2,46
,93
2,46
,96
,87
n.s.
2,57
1,22
2,47
1,34
2,19
1,25
4,42
,01
2,09
1,10
2,11
1,11
2,06
1,10
,11
n.s.
1,68
1,98
1,08
1,25
1,57
1,97
1,02
1,29
1,36
1,59
,76
1,00
5,09
6,29
,00
,00
978-84-695-8363-0
940
2,63
1,17
2,57
1,25
2,32
1,13
3,70
,02
2,86
1,17
2,69
1,29
2,74
1,21
1,27
n.s.
2,55
1,16
2,46
1,22
2,14
1,10
6,40
,00
3,42
1,23
3,48
1,27
3,24
1,32
2,07
n.s.
2,11
1,29
2,23
1,29
1,93
1,16
3,12
,04
2,92
1,22
2,76
1,28
2,49
1,23
5,81
,00
2,67
1,27
2,66
1,32
2,51
1,26
,90
n.s.
A travs de las pruebas Scheff se observa que existen diferencias significativas entre
el grupo de mayor experiencia docente (16-42 aos) y el grupo de menor experiencia (1-5
aos). As, encontramos que los docentes con mayor experiencia usan en menor medida
soportes informticos como los ordenadores, porttiles, pizarras digitales, internet o
programas educativos o software y los medios digitales en su prctica pedaggica. Pero
adems, utilizan tambin en menor medida las TIC para comunicarse con otros docentes o las
familias. Con respecto a las diferencias encontradas entre el grupo de mayor experiencia (1642 aos) y el de experiencia intermedia (6 -15 aos) solo se encuentran diferencias
estadsticamente significativas en el uso de la pizarra digital interactiva y los programas
informticos.
Discusin
El objetivo del presente estudio fue conocer la frecuencia de uso de las TIC en
docentes de infantil y primaria en funcin de los aos de experiencia profesional. De los
resultados del estudio se obtienen las siguientes conclusiones.
El uso de las TIC por los maestros de educacin infantil y primaria vara
sustancialmente segn las actividades del docente (tareas administrativas, comunicacin con
familias, compaeros e instituciones y herramienta docente en el aula), siendo mayor el uso
en las tareas administrativas y menor uso en el trabajo de aula.
Los anlisis sobre la prevalencia en el uso de las TIC en los distintos contextos y para
diferentes objetivos nos indican que aunque las TIC estn integradas en las dinmicas de las
aulas y los centros tanto como recurso en la prctica pedaggica, como instrumento para la
gestin administrativa y como medio de comunicacin con otros docentes, familias, etc., este
uso no est igualmente generalizado en todos los niveles. As, los docentes indican que
utilizan las TIC en su prctica pedaggica, la televisin y el vdeo, los ordenadores, internet,
los programas informticos y la cmara de fotos y vdeo digital pero este uso es mucho menos
frecuente cuando se trata de utilizar la sala de ordenadores, los porttiles y la PDI. Este hecho
puede ser debido a que aunque las TIC estn en la actualidad presentes en mayor o menor
media en los centros y los docentes saben utilizarlas, lo ms usual es contar con televisin,
978-84-695-8363-0
941
vdeo, cmara de fotos e incluso ordenadores organizados en un rincn especfico del aula (el
rincn del ordenador) pero otros recursos ms caros como son los porttiles o la PDI todava
no estn tan presentes y extendidos en los centros y en el caso de la PDI los docentes no
conocen su manejo y, por tanto, su uso es menos habitual. En cuanto a la sala de ordenadores,
dado que est a disposicin de todos los docentes y grupos del centro, su uso es mucho ms
limitado por cuestiones organizativas.
El alto porcentaje de uso de las TIC para tareas administrativas se explica porque en la
actualidad la Administracin educativa de la Comunidad Valenciana ha incorporado de
manera progresiva la gestin de centro y de aula (matrculas, evaluacin, datos de alumnos,
docentes, etc.) a travs de un programa informtico denominado ITACA que ha obligado a
todos los docentes a su uso de manera normalizada. Por tanto, todos los docentes han tenido
que aprender a utilizarlo para la gestin de los datos docentes y de los alumnos.
Podemos considerar el uso de las TIC como medio de la comunicacin ha sido el
ltimo nivel en la incorporacin y uso de las tecnologas en los centros por parte de los
docentes. As, los docentes utilizan las tecnologas para comunicarse con otros profesionales e
instituciones para documentarse, conocer recursos, etc. que les facilite su prctica pedaggica,
sin embargo, este recurso todava no est demasiado extendido como medio para la
comunicacin con las familias. Si analizamos el porcentaje de uso en relacin con los aos de
experiencia docente encontramos que la prevalencia se sita alrededor del 13% en el caso de
docentes con una experiencia intermedia (6-15 aos) y de una gran experiencia (entre 16-42
aos). En cuanto al uso mensual y trimestral el uso aumenta en el caso de docentes con menor
experiencia con un 25,3% y con docentes de mayor experiencia con un 26% mientras que en
el caso de docentes de experiencia intermedia se sita en un 20,4%. El uso de las TIC vara
significativamente en funcin de la experiencia docente de los maestros. As, el grupo de
docentes con mayor experiencia (16-42 aos) utiliza en menor medida las TIC tanto en su
prctica pedaggica como en tareas administrativas o de comunicacin con otros docentes o
familias. Concretamente, los docentes con ms aos de experiencia docente usan menos los
soportes informticos como ordenadores, porttiles y pantalla digital, recursos como internet
o programas educativos o software y los medios digitales en su prctica pedaggica. Adems,
utilizan tambin en menor medida las TIC para comunicarse con otros docentes o las familias.
Este hecho puede ser debido a una insuficiente o inadecuada formacin de profesorado en
nuevas tecnologas que les permita incorporar las TIC en su dinmica de aula y como medio
para la comunicacin. Por tanto, a la hora de establecer medidas para la formacin de los
docentes debera tenerse en cuenta distintos niveles de conocimiento y actualizacin en las
TIC. Sin embargo, el hecho de que la Administracin educativa haya generalizado su uso
como herramienta de gestin y administracin ha favorecido su uso.
Referencias
Area, M. (2008). Innovacin pedaggica con TIC y el desarrollo de las competencias
informacionales y digitales. Investigacin en la escuela, 64, 5-18
Aznar, I., Fernndez, F. e Hinojo, F. J. (2003). Formacin docente y TIC: Elaboracin de un
instrumento de evaluacin de actitudes profesionales. Revista Etic@net, 2.
Balanskat, A., Blamire, R. y Kefala, S. (2006). The ICT impact report. A review of studies of
ICT impact on schools in Europe. European Schoolnet, European Comission.
978-84-695-8363-0
942
978-84-695-8363-0
943
Resumen
Este trabajo da cuenta de los estudiantes para maestros de Matemtica y Computacin de la
Universidad Catlica del Maule en cuanto a la descripcin de sus concepciones y creencias y
la implementacin de los recursos tcnicos en el aula. La investigacin se enmarca dentro del
paradigma cuantitativo, de tipo no-experimental. La tcnica empleada, considera como
instrumento una encuesta, respecto a la implementacin de los recursos tcnicos en el aula.
La incorporacin de las Tecnologas de la Informacin y la Comunicacin en la sala de
clases es uno de los retos que se presenta a los profesores en el presente. Los resultados
vertidos de esta investigacin constituyen un aporte a la escuela de Pedagoga en
Matemticas y Computacin, en el mbito de su renovacin.
Descriptores: Creencias, Estudiantes para maestros,
tecnologa.
Abstract
This assignment for students of Mathematics and Computation at the Catholic University of
Maule is a description of their ideas and beliefs of the implementation of technology in the
classroom. The methodological framework is considered as an instrument of questionnaire
with the purpose of implementing technological resources in the classroom. The investigation
results are quantitative of the non-experimental type. The incorporation of Technology
Information in the classroom is one of the current professional challenges in education. The
research results will provide valuable information to modernize the School of Mathematics
and Computation Pedagogy.
Keywords: Beliefs, Student teachers, Teachers, ICT, Technology integration.
Introduccin
El proceso mental conocido como formacin de creencias en torno a un tema o
situacin especfica es orientado principalmente por la cultura ambiental que rodea al sujeto a
lo largo de toda su vida. Estas creencias orientan el actuar en la vida de cada individuo (cabe
mencionar docentes y otros profesionales con capacidad de impactar fuertemente en la
40
978-84-695-8363-0
944
educacin). Pero sin duda son las fuentes externas las que influyen considerablemente en el
desarrollo de las creencias de una persona.
Es de relevancia describir las creencias de los estudiantes para profesor en relacin
con el uso de los instrumentos tcnicos y los procesos de enseanza-aprendizaje, pues estas
creencias determinan en gran medida las decisiones que estos toman durante su prctica
profesional: su modo de ensear, su modo de evaluar, su relacin con los estudiantes entre
otros componentes del proceso educativo. La literatura sugiere acontecimientos que
modifican las creencias del profesorado. Por ejemplo, el establecimiento educativo en donde
un profesor trabaja modifica las creencias que este docente adquiri durante su formacin
inicial (Lorduy, Lambrao, Garcs, y Bejarano, 2009).
La irrupcin de los instrumentos tcnicos y/o tecnolgicos en el proceso educativo
tiene como consecuencia que los maestros estn en constante perfeccionamiento para
responder de manera positiva a estos cambios, considerados como revolucionarios Teliz y
Zidn (2011).: Conocido como El plan Ceibal (Conectividad Educativa de Informtica
Bsica para el Aprendizaje en Lnea) presentado en Uruguay y el plan Conectar Igualdad en
Argentina, (polticas pblicas). Los medios han avanzado en las aulas sin que sea posible
detenerlos, llegan con cada alumno que ingresa, ellos traen las nuevas tecnologas, las
manejan casi por instinto, nacieron y crecieron junto a las computadoras, lo que pone a los
docentes frente a un desafo ineludible: asumir la entrada de los medios de comunicacin y las
nuevas tecnologas en la sala de clases y darle a los alumnos las herramientas necesarias para
que elaboren sus propios juicios de valor frente a los mismos (Gabrijelcic, LLorens, Roca,
Santisi, Zambella (1998). Citando a Alonso y Gallegos (1996), quienes expresan que los
docentes de hoy deben desempear ciertas funciones bsicas con relacin a dichos cambios:
a) Poseer una actitud positiva ante la integracin de los nuevos modelos tecnolgicos, b)
Integrar los medios tecnolgicos como un medio para fortalecer la transmisin de la
informacin, c) Disposicin a la innovacin, d) Adoptar una postura crtica, de anlisis y de
adaptacin al contexto escolar, de los medios de comunicacin.
Se vuelve urgente que los profesores adopten nuevas estrategias en sus prcticas,
incorporando las TICs. Pero, ser posible que ellos las incorporen si no las conocen o no
creen?, Diversos autores, Monge (2005), citado por Puentes, Rioseco, Sanhueza, Villegas
(2011) sealan que:() estos desafos en la prctica han sido difciles de implementar, entre
otras cosas porque los profesores deben ensear desde una manera en que ellos mismos no
fueron formados, rompiendo con una tradicin clsica en mtodos de enseanza, que ha
tenido como recurso casi exclusivo el libro de texto para el desempeo de su tarea
profesional. El nuevo perfil para los maestros hoy, es ser un orientador considerando adems
que son los propios estudiantes quienes traen las TICs. La red Enlaces en Chile haba
contribuido de manera importante a la reduccin de la brecha digital, en la medida que el 85%
de los estudiantes, independientemente del tipo de establecimiento escolar y nivel
socioeconmico, sealaba que empleaban recursos informticos e internet gracias a su escuela
o liceo (p. 47).
Actualmente se puede ver a Chile (Grfico 1) como el primero en toda Latinoamrica
cuyo Indicador de la Sociedad de la Informacin (ISI) supera al de varios pases de Europa.
Es as como con 5,85 puntos supera a Portugal tercer trimestre 2011 debido principalmente a
la mejora de las Tics (Instituto de Estudios Sociales y Empresariales (IESE, 2011) (Prensario
TI, 2012, p.28). Claro (2010) se refiere a las polticas de incorporacin de las TIC a la
educacin en Latinoamrica, observa que en distintos grados y dependiendo del nivel de
978-84-695-8363-0
945
desarrollo de los pases, se han logrado avances importantes para acercarse y, en algunos
casos, lograr el acceso universal de los estudiantes a las Tics. Chile se observa en la mitad de
los datos sobre todos los pases de la regin (p. 5).
La evidencia disponible muestra que el acceso casi universal a computadores e internet
con que cuentan la casi totalidad de las escuelas chilenas no tiene un correlato en la
innovacin de la prctica pedaggica de sus docentes, se ha hecho necesario desarrollar
Habilidades en el uso de las tecnologas de la informacin y de la comunicacin (Tuning,
2007, p. 44). Frente a esto el Gobierno de Chile (2008) considera que este marco orienta en
aspectos centrales a tener en cuenta al momento de definir un estndar TIC para educacin, al
proponer cuatro grupos de competencias que a su vez se enmarcan en cuatro dimensiones,
generando el espacio para que sea interpretado de acuerdo a cada contexto y enfoque
pedaggico. De esta manera la formacin de maestros de Pedagoga en Matemtica y
Computacin, es orientada a mejorar la formacin de profesores de la Regin del Maule,
integrando la ciencia y tecnologa al desarrollo (UCM, 2008, pp. 19-35).
Mtodo
La investigacin tiene un carcter exploratorio y se adscribe a un enfoque cuantitativo,
de diseo no experimental descriptivo, especficamente de tipo encuesta (Gay y Airasian,
2000) con el propsito de aproximarnos a las creencias de los estudiantes para maestros de
Matemtica y Computacin: recursos Tcnicos en el Aula.
Se realiz un muestreo no probabilstico de tipo disponible. De un universo de 248
estudiantes matriculados, participaron en el estudio un total de 140. Las edades oscilan entre
19 y 30 aos, siendo la media de edad de 24 aos. Sus aos de ingreso a la carrera
corresponden a: 2006- 2012. Los datos han sido recogidos a travs de una encuesta tipo
Likert en formato impreso. La estructura del instrumento se compone de 45 criterios
agrupados en 4 dimensiones (A, B, C, D) generales con 3 subdimensiones cada una (a
excepcin de la dimensin D que posee 2). El cuerpo de creencias antes mencionado, se
articula en relacin a las cuatro dimensiones: Creencias Generales, Presentacin de
contenidos, Gestin de contenidos, Competencias en uso de recursos tcnicos, los encuestados
responden en un rango de posibilidades (0. Total Desacuerdo (TD), 1 Desacuerdo (D), 2
Indiferente (I), 3 Acuerdo (A), 4 Total Acuerdo (TA)). Segn su grado de acuerdo con cada
enunciado.
Valorado el instrumento se recogieron los datos, que fueron analizados describiendo
las creencias de los estudiantes para maestros respecto de las TICs, los datos recolectados en
una planilla digital son analizados por el Software estadstico SPSS, midiendo la fiabilidad del
instrumento mediante el de Cronbach. Tambin se realiza el anlisis de las frecuencias de
las dimensiones A B C D mediante tablas y grficos de barra adems de las correlaciones por
criterios que pudieran existir a travs de r de Pearson y su grado de significancia. Los datos
del alfa de Cronbach en un primer momento para todos los tems fue de 0.66, una dbil
aceptacin, con el software SPSS realizamos un anlisis de escala, anlisis de fiabilidad,
estadsticos escala, eliminando el elemento distorsionador, y de esta forma el programa arroj
las preguntas de la encuesta que no tenan mucha relacin con los tem, se procedi a
eliminar estas preguntas, obteniendo un nuevo alfa de Cronbach igual a 0,73 aceptable, luego
se confeccionaron las tablas y grficos, que son analizados.
978-84-695-8363-0
946
978-84-695-8363-0
947
978-84-695-8363-0
948
978-84-695-8363-0
949
Tabla 2
Secundaria, uso recursos tcnicos por el profesor-alumno
978-84-695-8363-0
950
978-84-695-8363-0
951
clases, considerando la utilizacin de los recursos tcnicos en el aula como un distractor que
entorpece el normal funcionamiento de una clase, por lo que el ambiente que genera esta
situacin hace que el profesor deje de prestar atencin al contenido por ensear para poder
controlar la desatencin que se produjo.
En relacin a: Cules son las creencias de los estudiantes para maestros de
Matemtica y Computacin de la Universidad Catlica del Maule respecto del aprendizaje de
los alumnos cuando se implementan las TICs en el aula? se concluye que los recursos
tcnicos ayudan en la resolucin de problemas matemticos, tambin se cree que el
conocimiento de diferentes recursos es til para resolver los ejercicios en las clases de
matemtica, sin embargo, se manifiesta una creencia contraria a que los aprendizajes puedan
ser significativos utilizando los recursos tcnicos, pues la distraccin juega un rol
fundamental dentro de esta creencia.
Cuando nos preocupamos por Conocer la relacin que existe sobre las creencias que
tienen los estudiantes de pedagoga en Matemticas y Computacin de la Universidad
Catlica del Maule en cuanto al ambiente que se genera en la sala de clases y el nivel de
aprendizaje que se logra en los estudiantes mediante la implementacin de los recursos
tcnicos en el aula, se puede destacar que el ambiente que se genera en la sala de clases al
utilizar los recursos tcnicos es ameno, sin embargo, el aprendizaje se ve truncado por la
distraccin que implica estos recursos, no obstante, si es posible lograr controlar esta
situacin de distraccin, los aprendizajes que se logran en los estudiantes pueden ser
significativos.
El perfeccionamiento permanente del profesorado respecto de los recursos tcnicos
jugar un rol trascendente, pues para quienes no han sido formados con las tecnologas es
difcil, que solo por su motivacin intrnseca logren los resultados esperados, as se vuelve
necesario que el currculum cambie y que se enfoque en formar a los futuros docentes con la
utilizacin de las tecnologas. Se vuelve fundamental esta nueva tarea que es integrar las
tecnologas en la educacin y alejar as el paradigma tradicional de la educacin formal.
Referencias
Alonso, C. y Gallego, D. (1996). Formacin del profesor en Tecnologa Educativa. En D.
Gallego (Coord.), Integracin curricular de los recursos tecnolgicos, pp. 31-64.
Barcelona: Oikos-Tau.
Claro, M. (2010). Impacto de las TIC en los aprendizajes. Santiago de Chile.
Cox, M. y Marshall, G. (2007). Effects of ICT: Do we know what we should know?
Education and Information Technologies.
Daz, C. Martnez, P. Roa, I. Sanhueza, M. (2010). Los docentes en la sociedad actual: sus
creencias y cogniciones pedaggicas respecto al proceso didctico. Consultado en
Octubre, 08, 2012 en: http://polis.revues.org/625.
Escudero, J.M. (1995). Tecnologa e Innovacin Educativa. Revista de Pedagoga, 47 (2).
Gabrijelcic, LLorens, Roca, Santisi, Zambella (1998). Sin Miedo a los Medios. Buenos Aires.
978-84-695-8363-0
952
978-84-695-8363-0
953
Resumen
Esta comunicacin se centra en estudiar el equipamiento, uso y consumo de medios digitales
(Internet, redes sociales, telfono mvil, consola de videojuegos y televisin) del alumnado
con necesidad especfica de apoyo educativo, escolarizado en Educacin Secundaria
Obligatoria (ESO) en centros educativos de la Regin de Murcia, para destacar posibles
diferencias con el alumnado sin necesidad especfica de apoyo educativo. Para la obtencin
de datos, se utiliz un cuestionario de 73 tems con cuatro opciones de respuesta que fue
administrado a 2075 alumnos de 3 y 4 de ESO, de los que 465 tenan necesidad especfica
de apoyo educativo. Los resultados sealan la existencia de diferencias entre el alumnado
con y sin necesidad especfica de apoyo educativo. En las conclusiones se invita a reflexionar
sobre las implicaciones educativas y sociales de los resultados hallados; y la necesidad de
desarrollar una educacin para los medios.
Descriptores: Medios digitales, Alumnado con necesidad especfica de apoyo educativo,
Internet, Televisin, Telfono mvil, Redes sociales, Consola de videojuegos.
Abstract
This paper studies the equipment, use and consumption of digital media (Internet, social
networks, mobile phone, game console and television) of pupils with special educational
needs of Secondary Education (ESO) in schools in the Region of Murcia, to highlight possible
differences with the students without special educational need. For data collection, we used a
questionnaire of 73 items with four response options. It was administered to 2075 students in
the 3rd and 4th year of ESO, of which 465 pupils had special educational need. The results
indicate the existence of differences between students with and without special educational
needs. The conclusions are invited to reflect on the educational and social implications of the
results found, and the need to develop media education.
Keywords: Digital media, Pupils with special educational needs, Internet, Television, Mobile
Phone, Social Networks, Game Console.
978-84-695-8363-0
954
Introduccin
Desde siempre, los sistemas educativos se han enfrentado a mltiples retos y desafos
originados dentro del marco socio-histrico en el que se insertan. Sucede que, en los ltimos
aos, con el advenimiento de las Tecnologas de la Informacin y Comunicacin (TIC), como
proceso ms destacado, estos retos y desafos son de tal calado que han dado lugar a una
autntica revolucin educativa (Esteve, 2008). Lejos de concebirse como un problema, la
irrupcin de las TIC abre nuevas posibilidades y plantea nuevas exigencias para disear el
aprendizaje del siglo XXI; exigencias que, a nuestro entender, no estn exentas de esfuerzos.
Es difcil encontrar otra poca histrica de la educacin que haya obligado tanto en tan poco
tiempo a los profesionales educativos. Baste referenciar las implicaciones que han tenido en
nuestras vidas algunos medios digitales como la televisin, el telfono mvil, Internet y las
redes sociales, con una incidencia especial en los jvenes, que las ha constituido como aliadas
afectivas, construyendo una nueva generacin, la generacin interactiva (Sdaba y Bringu,
2009).
Investigaciones recientes (Rubio, 2009) destacan que los jvenes utilizan los medios
digitales para el establecimiento de relaciones sociales y para ocupar su tiempo de ocio.
Adems, suelen hacer uso de ellas de manera individual y dentro del hogar (Buckingham,
2008).
En investigaciones anteriores (Ballesta, Gmez, Guardiola, Lozano y Serrano, 2003;
Ballesta, Lozano y Serrano, 2003) nos hemos planteado cmo esta nueva forma de consumo
que plantean los medios digitales en el desarrollo de los adolescentes est repercutiendo o
repercutir en sus formas de pensar, aprender, reflexionar, trabajar y desenvolverse. En este
sentido, en esta investigacin hemos pretendido conocer los principios rectores de este
fenmeno social aproximndonos a este grupo generacional.
De ah, la importancia de la informacin recibida de los agentes de socializacin que,
si bien, hace unos aos se concretaba en unos pocos: el centro escolar y la familia; en la
actualidad, se han ampliado incluyendo medios como Internet, telfono mvil, redes sociales,
televisin y videojuegos que, en cierto modo, la sociedad (jvenes y familias) ha recurrido a
ellos como agentes socializadores. Es ms, estos nuevos agentes socializadores cada vez
influyen a ms temprana edad y de forma ms consustancial a la propia lgica de la psicologa
adolescente de individualizacin. Estos dinamismos sociales que acabamos de plantear,
pueden originar una brecha digital entre el alumnado (Buckingham, 2007), detectndose
dificultades en la comunicacin, que pueden ser motivadas, tanto por inexistencia de
equipamiento y acceso, como por un inadecuado uso de los medios digitales (Ballesta y
Lozano, 2007; Lozano y Ballesta, 2004, 2005). Por consiguiente, estos estudios han resaltado
la existencia de dos mundos en nuestros centros escolares: el alumnado que accede y utiliza
las TIC y el alumnado que se mantiene al margen de dicho acceso y uso que, generalmente, lo
representa el alumnado con necesidad especfica de apoyo educativo.
Numerosos estudios sealan que los medios digitales tienen un papel prioritario en el
desarrollo de los alumnos, y en especial, del alumnado con necesidad especfica de apoyo
educativo (Lozano y Alcaraz, 2011; Lozano, Alcaraz y Bernabeu, 2012), pues estos medios
pueden favorecer la adquisicin de competencias por parte del alumnado. De hecho, los
medios digitales pueden ser vistos como una posibilidad para hacer efectivos los principios de
equidad e igualdad de oportunidades en el acceso a la informacin, al conocimiento y en la
posibilidad de interrelacionarse con sus iguales.
978-84-695-8363-0
955
Ante la influencia que los medios digitales estn protagonizando en los jvenes, la
educacin no puede mirar para otro lado. En este sentido, puede ser significativo aproximarse
y conocer las experiencias que los jvenes desarrollan con los medios digitales, es decir, es
importante dar respuesta a las siguientes cuestiones: qu uso y consumo realizan los jvenes
de nuestros centros escolares en relacin a los medios digitales?, y es posible que estas
nuevas formas de uso y consumo estn originando cambios en las formas de pensar, sentir y
actuar de dicho sector de la poblacin?
Mtodo
Objetivos
El objetivo general es conocer el uso y consumo de medios digitales del alumnado con
necesidad especfica de apoyo educativo de centros de Educacin Secundaria de la Regin de
Murcia y compararlo con el que realiza el alumnado sin necesidad especfica de apoyo
educativo.
Participantes en la investigacin
En esta investigacin participaron 2075 alumnos de 3 y 4 de la ESO de centros
docentes pblicos y privados de la Regin de Murcia. El 22,4% (n= 465) era considerado,
segn la LOE (2006), alumnado con necesidad especfica de apoyo educativo y el resto
(77,6%) no era considerado como tal. Dentro del total del alumnado con necesidad especfica
de apoyo educativo, el 76,4% corresponda a alumnos adscritos al programa de
diversificacin curricular. El 28,8% (n= 134) era de origen extranjero y sus edades se situaban
entre los 15 y 16 aos (X= 15,7 aos).
Instrumento de recogida de informacin
Se utiliz un cuestionario de 73 tems con cuatro opciones de respuesta que se
estructur en seis dimensiones (Tabla 1):
Dimensin
Tabla 1
Estructura del cuestionario de recogida de informacin
Datos de identificacin
Uso y consumo de Internet
Uso y consumo de Redes
Sociales
Uso y consumo de Telfono
Mvil
Uso y consumo de Consola de
Videojuegos
Uso y consumo de Televisin
Objetivo
Recoger informacin sociodemogrfica y de inters pedaggico sobre el
alumnado participante y su familia.
978-84-695-8363-0
956
Procedimiento
Tras el proceso de seleccin de participantes, los cuestionarios fueron repartidos y
recogidos en los centros por los miembros del equipo de investigacin o gracias a la
colaboracin desinteresada de los tutores del alumnado escolarizado en los cursos objeto de
investigacin.
Por otro lado, los datos fueron analizados con el paquete estadstico SPSS for Windows
15.0, utilizando estadsticos descriptivos (frecuencias, medias y desviacin tpica) y
estadsticos inferenciales (Prueba T).
Resultados
Equipamiento y acceso a medios digitales
Los resultados obtenidos muestran que el alumnado con necesidad especfica de apoyo
educativo (alumnado con NEAE) dispone de una configuracin bsica de medios digitales en
el hogar, como se aprecia en la Tabla 2:
Tabla 2
Equipamiento de medios digitales del alumnado con NEAE
Medios digitales
Ordenador
Internet
Redes sociales
Telfono mvil
Consola de videojuegos
Equipamiento
84,8%
73,1%
84,7%
91,7%
69,0%
50
44,5
41,6
40
28
30
20
10
ACNEAE
15,2
11,7
No ACNEAE
9,5
4,3
0
No tengo ordenador
Tengo un ordenador
con acceso a Internet
Tengo varios
ordeandores con
acceso a Internet
978-84-695-8363-0
957
Adems, el alumnado con NEAE (46,2%) tiene, en mayor medida que el resto de
participantes (39,3%). De hecho, tan slo el 27% de alumnos con NEAE tienen mviles con
acceso a la Red.
En relacin a la consola de videojuegos, tambin existen diferencias significativas
entre ambos grupos de participantes. En este sentido, se aprecia que el alumnado con NEAE
tiene consola de videojuegos en menor proporcin que el resto.
Uso y consumo de medios digitales
Pero, qu uso y consumo de medios digitales realizan ambos grupos de alumnos?
Existen diferencias significativas entre ellos?
En relacin al uso de Internet, los resultados que obtiene el alumnado con NEAE
quedan reflejados en la Tabla 3:
Tabla 3
Uso de Internet del alumnado con necesidad especfica de apoyo educativo
tem 12. Con qu frecuencia buscas informacin
para realizar trabajos de clase cuando ests
conectado a Internet?
Respuestas
Frecuencia
Nunca
8,2%
Casi nunca
44,2%
Casi siempre
39,0%
Siempre
8,7%
Frecuencia
19,9%
7,4%
40,6%
32,1%
70
60
50
40
30
20
10
0
978-84-695-8363-0
958
66,1
56,7
ACNEAE
21,4
21,1
No ACNEAE
17,7
10,8
4,2
Nadie, he aprendido yo
solo
Mi familia
Mis amigos/as
1,9
Mis profesores
70
978-84-695-8363-0
959
65,5
58,6
60
50
40
ACNEAE
30
18,9
20
18,2
No ACNEAE
14,1
7
10
8,5
9,3
0
A nada
A los estudios
A los amigos
A la familia
978-84-695-8363-0
960
Por otra parte, el alumnado con NEAE utiliza ms las redes sociales para hacer nuevos
amigos que el resto de la muestra, lo que puede indicar una falta de integracin con sus
compaeros de clase y bsqueda de nuevas amistades para satisfacer la necesidad de
relacionarse. Como plantean Ballesta y Lozano (2007), se puede concluir que los medios nos
diferencian. Por eso, desde mbitos educativos debe abordarse esta situacin para plantear
soluciones y dar respuesta a las necesidades educativas que dichas diferencias demandan,
como favorecer la igualdad de oportunidades de acceso a los mismos, con el fin de eliminar
los posibles problemas de exclusin social y fracaso escolar (Lozano y Ballesta, 2004). De lo
anteriormente expuesto, al igual que Strasburger (2009), se constata una necesidad de
profundizar en los centros educativos y en las familias de una educacin para los medios, que
potencie el buen uso de los mismos desde la perspectiva pedaggica y formativa.
Referencias
Ballesta, F. J., Gmez, J. A., Guardiola, P., Lozano, J. y Serrano, F. J. (2003). Los jvenes y
los medios de comunicacin. El consumo de medios en jvenes de secundaria. Madrid:
CCS.
Ballesta, F. J. y Lozano, J. (2007). Los medios de comunicacin, nos igualan o nos
diferencian? Enseanza, 25, 45-67.
Ballesta, F. J., Lozano, J. y Serrano, F. J. (2003). Los jvenes de Secundaria y el consumo de
medios de comunicacin en Murcia. Comunicacin y Pedagoga, 187, 22-36.
Buckingham, D. (2007). Digital Media Literacies: Rethinking media education in the age of
the Internet. Research in Comparative and International Education, 2(1), 43-55.
Buckingham, D. (2008). Digital culture, Media education and the Place of Schooling.
Recuperado el 10 de septiembre de 2011 de www.childrenyouthandmediacentre.co.uk
Esteve, J. M. (2008). La tercera revolucin educativa. La educacin en la sociedad del
conocimiento. Barcelona: Paids.
Livingstone, S y Bovill, M. (2001). Children and their changing media environment a
European comparative study. London: Lawrence Erlbaum.
Lozano, J. y Alcaraz, S. (2011). Software educativo para la enseanza de competencias
emocionales en alumnado con trastornos del espectro autista. Educacin XX1, 14(2), 189212.
Lozano, J., Alcaraz, S. y Bernabeu, M. (2012). Competencias emocionales del alumnado con
trastornos del espectro autista en un aula abierta especfica de Educacin secundaria. Aula
Abierta, 40(1), 15-26.
Lozano, J. y Ballesta, F. J. (2004). El acceso a la informacin de los jvenes inmigrantes de
secundaria en la Regin de Murcia. Boletn de la ANABAD, 54(1-2), 141-162.
Lozano, J. y Ballesta, J. (2005). El consumo de medios de comunicacin en los jvenes de
educacin secundaria obligatoria de la regin de Murcia. En J. A. Ortega, El profesorado
978-84-695-8363-0
961
ante el reto de las nuevas tecnologas en la sociedad del conocimiento (pp. 322-342).
Granada: Universidad de Granada.
Rubio, A. (Dir.) (2009). Adolescentes y jvenes en la red: factores de oportunidad. Madrid:
Injuve.
Sdaba, C. y Bringu, X. (2009). La generacin interactiva en Espaa: nios y adolescentes
ante las pantallas. Barcelona: Ariel-Fundacin Telefnica.
Strasburger, V. C. (2009). Media and children. What Needs to Happen Now? Journal of the
American Medical Association, 301(21), 2265-266.
Notas
Proyecto "El uso y la interaccin de las Tecnologas de la Informacin y la Comunicacin
(TIC) en el alumnado de Educacin Secundaria Obligatoria de la Regin de Murcia " ( ref.
15252/PPC/10). Ayudas a la investigacin del Programa Sneca 2010. "El consumo de
medios digitales en el alumnado de Educacin Secundaria Obligatoria de la Regin de
Murcia". Proyecto de Innovacin / Investigacin del convenio Universidad de Murcia y
Consejera de Educacin, Formacin y Empleo. Convocatoria P. III. 2009.
978-84-695-8363-0
962
Resumen
Pretendemos argumentar la posibilidad y deseabilidad de aprender a programar
aplicaciones para dispositivos mviles (apps), desde nuestros centros educativos y en el
marco de la atencin a la diversidad; como enriquecimiento curricular indicado
especialmente para estudiantes de alta capacidad. En una triple vertiente: la programacin
de apps es adecuada para sujetos de alta capacidad dado que existe correspondencia entre
las demandas cognitivas de la tarea y las caractersticas de los ms capaces; es viable y
econmico dado que para ello se pueden establecer fcilmente metodologas didcticas a
distancia y soportadas tecnolgicamente; es una habilidad emergente y relevante dado que
permite a los estudiantes generar un producto final de creciente uso, utilidad y valoracin
social. As, pretendemos mostrar como la programacin de apps supone un
enriquecimiento curricular completo pues implica profundizar respectivamente en el
contenido, el proceso y el producto de aprendizaje de los alumnos y alumnas ms capaces.
Descriptores: alta capacidad, enriquecimiento curricular, e-learning, m-learning, i-mode.
Abstract
We intend to argue the possibility and desirability of learning to program mobile applications
("apps"), from our schools and in the context of attention to diversity, as indicated curricular
enrichment especially for students of high ability. In a three-pronged: programming "apps" is
suitable for high-capacity subjects as correspondence between the cognitive demands of the
task and the characteristics of the most capable, it is feasible and economical to do so
because you can easily set distance teaching methodologies and technologically supported, it
is an emerging and important skill because it allows students to create a final product of
increasing use, utility and social value. So try to show as programming "apps" is a complete
curriculum enrichment respectively deepen it involves content, the process and product of
learning more able pupils.
Keywords: high ability, curriculum enrichment, e-learning, m-learning, i-mode.
Introduccin
Nos situamos en el marco general de la atencin a la diversidad de intereses,
capacidades y necesidades del alumnado, establecido inicialmente por la Ley Orgnica
1/1990 de Ordenacin del Sistema Educativo (LOGSE, 1990), con especial acento en los
978-84-695-8363-0
963
978-84-695-8363-0
964
978-84-695-8363-0
965
978-84-695-8363-0
966
978-84-695-8363-0
967
978-84-695-8363-0
968
Referencias
Agencia EFE (27 de marzo de 2013). Nick D'Aloisio, el adolescente de 17 aos que ha creado
una
app
de
23
millones.
La
Vanguardia.com.
Recuperado
de
http://www.lavanguardia.com/tecnologia/20130327/54369594772/nick-d-aloisioadolescente-app-47-millones.html
Benbow, C. (1991). Mathematically talented children: can acceleration meet their educational
needs? En Colangelo, N., y Davis, G. A., Handbook of Gifted Education (p. 154-165).
Massachusetts: Allyn and Bacon.
Cattell, R. B. (1963). Theory of fluid and crystallized intelligence: a critical experiment.
Journal of Educational Psychology, 54, 1-22.
Cheng, P. (1993). Metacognition and giftedness: The state of the relationship. Gifted Child
Quarterly, 37 (3), 105-12.
Crombie, G., Bouffard-Bouchard, T., y Schneider, B. H. (1992). Gifted Programs: Gender
Differences in Referral and Enrollment. Gifted Child Quarterly, 36 (4), 213-214.
Dez, A., Santiago, R., y Climent, J. (2013). Eduapps. Recuperado de http://www.eduapps.es/
FUNED (2013). Iniciacin al desarrollo de Apps en iOS6 para iPhone y iPad (Aprendiz de
iOS). Recuperado de http://www.fundacion.uned.es/actividad/idactividad/4750
Gagn, F. (1991). Toward a differentiated model o giftedness and talent. En Colangelo, N., y
Davis, G. A., Handbook of Gifted Education (p. 65-80). Massachusetts: Allyn and
Bacon.
978-84-695-8363-0
969
978-84-695-8363-0
970
978-84-695-8363-0
971
Resumen
Actualmente la preocupacin por la apariencia fsica en los adolescentes es cada vez mayor,
ya que esto les da paso a ser aceptados socialmente. Muchos tratan de hacer lo posible para
mantenerse en forma sin medir las consecuencias de construir la figura deseada (Feinstein y
Sorosky, 1998). El objetivo de este proyecto es que los jvenes de bachillerato lleguen a
planificar su propia dieta y rutina de ejercicios, adems de contar con nociones bsicas de
cuidados del cuerpo. Para ello, utilizarn una plataforma con informacin sobre
combinacin y consumo de alimentos saludables y ejercicio fsico. La informacin de esta
plataforma, aparecer en diferentes idiomas (40% espaol, 30% valenciano, 20% ingls y
10% alemn), cuyos porcentajes variarn a medida que trabajen con el programa, logrando
su dominio y conocimiento. Esto se trabajar en las sesiones de EF; y finalmente,
traspasarn sus conocimientos a alumnos de la ESO, en las jornadas de alimentacin del
centro.
Descriptores: alimentacin, ejercicio saludable, idiomas, TICs, adolescentes.
Abstract
Nowadays teenagers are worried about the physical appearance to be accepted socially.
Many of them try to do everything they can, to get and to keep fit and do not take into account
the consequences that keeping feet has (Feinstein y Sorosky, 1998). What this project means
is that high school students are able to plan their own diet and exercise routine, besides basic
notions of body care. To do this, they have to make use of the platform with information about
combining food, food intake and exercise. The information on this platform, appears in
different languages (40% Spanish, 30% Valencian, 20% English and 10% German), whose
percentages will change as the program goes on, so students will achieve mastery and
knowledge of other languages. All this will be implemented in EF sessions; and finally all
their knowledge will be shared with students of ESO, in a healthy activity week at High
School.
Keywords: food, healthy exercises, languages, technologies, teenagers.
Introduccin
Durante los ltimos aos estamos asistiendo a un resurgir de las relaciones entre la
actividad fsica y la salud, debido a la preocupacin que han despertado los temas
relacionados con la salud en la sociedad espaola de nuestros das, concretamente en los
978-84-695-8363-0
972
978-84-695-8363-0
973
Resultados
Encuesta previa al desarrollo del proyecto (1 fase)
La Tabla 1 que se presenta a continuacin, muestra el nmero de alumnos al que se le
realiz la encuesta, que fueron los que escogieron como optativa el rea de Educacin Fsica
en 2 Bachillerato en el IES Valle de Elda (Alicante):
Tabla 1
Alumnos matriculados en el rea de Educacin Fsica en 2 Bachillerato
Modalidad
Ciencias Sociales
Humanidades
Ciencias
Tecnologa
Total =
Nmero de alumnos
20
17
15
8
60
El objetivo de esta prueba era, por un lado, adaptar la plataforma a sus intereses sobre
salud y alimentacin, y conocer su dominio de los diferentes idiomas (espaol, valenciano,
ingls y alemn). Y por otro, predecir el xito del proyecto, o al menos que la realizacin de
ste tuviera un buen funcionamiento y fuera de utilidad para el alumnado.
Para el desarrollo del cuestionario, se realizaron los siguientes pasos:
1) Se inform al alumnado del proyecto.
2) Se verific su participacin en el mismo.
3) Se dieron las instrucciones para resolverlo:
4) Se recogieron los cuestionarios, conservando el anonimato.
El cuestionario fue desarrollado en una sesin de Educacin Fsica y consista en 25
preguntas cerradas, cuyas respuestas eran: S, NO, NS/NC. stas estaban dividas en tres
bloques: 1) cinco preguntas sobre las nuevas tecnologas, 2) cinco preguntas sobre idiomas y
3) quince preguntas sobre contenidos de actividad fsica y salud y alimentacin.
A continuacin se expone un grfico (Figura 1) con las respuestas obtenidas por el
alumnado en dicha encuesta:
978-84-695-8363-0
974
A tenor de los resultados expuestos en el grfico anterior, este proyecto podra ser
exitoso. En la Figura 2 constatamos que los 60 alumnos hacen un uso diario del ordenador
(pregunta 1) y conocen el funcionamiento de la plataforma Moodle (pregunta 4). Prueba de
esto la encontramos en que 53 alumnos, disponen de un PC en casa con el que trabajar
diariamente (pregunta 2). Como podemos observar, 45 de ellos desconocen la utilizacin de
buscadores (pregunta 3), quiz es por eso que solo 35 ven viable trabajar la asignatura de EF a
travs de las nuevas tecnologas (pregunta 5).
978-84-695-8363-0
975
Como podemos observar todos los alumnos encuestados dominan el espaol (pregunta
6) y aunque la lengua cooficial de la comunidad sea el valenciano, menos de la mitad (25) lo
dominan (pregunta 7). Por otro lado, vemos que solo 15 personas dominan el ingls (pregunta
8) y que 59 desconocen el alemn (pregunta 9). Finalmente, a pesar de la carencia que tienen
de casi todos los idiomas, ms de la mitad (40) creen importante profundizar y trabajar con
ellos.
Por ltimo, en la Figura 4 se muestran los resultados de las preguntas relacionadas con
la actividad fsica y la salud. Como podemos observar, la mayora de los alumnos (55) saben
en qu consiste una dieta equilibrada (pregunta11), aunque solo la mitad (30) come frutas y
verduras frecuentemente (pregunta 12) y por el contrario, 40 de ellos come diariamente
bollera industrial y dulces (pregunta 13). Destacamos que menos de la mitad (25) hace
ejercicio todos los das (pregunta 14), la mayora de ellos (58) afirma que hace ejercicio entre
dos y tres veces por semana (pregunta 15) y solo 2 alumnos practican actividad fsica
eventualmente (pregunta 16). Adems, 46 piensan que todo tipo de ejercicio es saludable
(pregunta 17). Por otro lado, en cuanto al descanso se refiere, vemos que nicamente 12
alumnos duermen entre siete y ocho horas diarias (pregunta 18) y la mitad aproximadamente
(33) duerme menos de siete (pregunta 19). Y por lo que respecta a la ingesta de agua,
concluimos que 28 alumnos beben dos litros diarios (pregunta 20), ms de la mitad (45)
ingieren menos de un litro al da (pregunta 21), afirmando 8 de ellos que durante las comidas
toman refrescos (pregunta 23). Finalmente, verificamos que 28 descansan despus de cada
comida (pregunta 24) y que solo 12 de ellos, realiza los descansos correspondientes despus
de realizar ejercicio fsico (pregunta 25).
978-84-695-8363-0
976
Foros: en este apartado el alumnado poda hacer sus aportaciones y compartirlas con el
resto de sus compaeros.
Cuestionarios: cada vez que trabajaba cada contenido, al alumnado se le abra un test
con preguntas relacionadas con el tema, que contestaba individualmente. ste, una vez
finalizado, era calificado automticamente con la explicacin correspondiente en caso
de error.
En base a los resultados obtenidos, podemos decir que la implicacin del alumnado en
esta fase, fue sobresaliente, destacando la evolucin por parte de estos en el trabajo con
idiomas que desconocan. Adems, los foros reciban ms de 50 participaciones diarias con
inquietudes, propuestas y noticias que haban escuchado en algn medio de comunicacin.
Por otro lado, los resultados de los test de evaluacin fueron ptimos, ya que la media de las
calificaciones fue de 8,24. Finalmente, proponer actividades en la plataforma y llevarlas a la
prctica en las sesiones de EF, fue una tarea realmente significativa para ellos, porque podan
verificar la viabilidad de cada una de estas.
Realizacin de las jornadas (3 fase)
La tercera fase de este proyecto, consista en la participacin del alumnado de 2
Bachillerato en las jornadas celebradas en el Instituto durante la semana de la ciencia y la
salud. Lo que se pretenda era que pusiesen en prctica los contenidos trabajados a travs de la
plataforma y que asumieran responsabilidades frente a un grupo. Para ello, se organizaron
diferentes talleres: conferencias sobre salud, actividades ldicas sobre ejercicio fsico y puntos
de informacin donde se podan consultar dudas o aspectos de inters. Todas y cada una de
estas actividades eran llevadas a cabo y coordinadas por alumnos de 2 Bachillerato y
dirigidas a los de 1 ESO.
Valoracin de los participantes
Con el fin de obtener las valoraciones del alumnado de 2 Bachillerato, se les someti a un
cuestionario con seis tems a evaluar. Cada uno corresponda a cada una de las partes de las
que est compuesto el presente proyecto: 1) la plataforma, 2) los idiomas, 3) contenidos sobre
actividad fsica y salud, 4) aplicacin prctica en las clases de EF, 5) desarrollo de las
jornadas, 6) valoracin personal sobre el trabajo llevado a cabo durante todo el proyecto.
De las encuestas se extrajeron los resultados que se reflejan en la Tabla 2:
978-84-695-8363-0
977
Tabla 2
Resultados de las encuestas sobre las diferentes fases del proyecto
tems
Trabajo con la plataforma
Aprendizaje de idiomas
Dominio de los contenidos
Trabajo en EF
Experiencia de las jornadas
Valoracin personal
MB
55
48
50
43
57
52
B
4
5
5
10
3
8
N
1
4
5
7
0
0
R
0
3
0
0
0
0
M
0
0
0
0
0
0
MM*
0
0
0
0
0
0
*MB: Muy bien, B: Bien, N: Normal, R: Regular, M: Mal, MM: Muy mal
Como podemos observar el 81% del alumnado opina que el trabajo con la plataforma
ha sido muy bueno, prueba de ello la tenemos en que 48 consideran haber mejorado el
dominio de los idiomas propuestos y la mayora (50) poseer conocimientos sobre contenidos
saludables. Por un lado, 43 de ellos opinan que llevar a la prctica las actividades propuestas
en las sesiones de EF es una estrategia muy til. Y an excede la cantidad a 57 cuando se les
pregunt sobre la experiencia de las jornadas. Finalmente, en cuanto a la calificacin personal
de todas las fases desarrolladas, hemos de destacar que 52 alumnos la valoran como muy
buena.
Todo esto se puede corroborar mediante la Figura 5, donde se refleja la suma global de
todos los datos de la encuesta sobre la valoracin del proyecto.
Discusin
Como defini la Organizacin Mundial de la Salud (OMS) en 1946, cuando nos
referimos a la salud no podemos hablar nicamente de ausencia de enfermedad, sino de un
estado completo de bienestar fsico, mental y social (http://www.who.int/es/). Actualmente,
nuestra sociedad se encuentra cada vez ms preocupada por los problemas de salud y por los
cambios de hbitos de los adolescentes, ya que stos orientan a prcticas poco saludables, que
podran desembocar en futuras enfermedades (Delgado, 1999).
Los centros educativos ofrecen innumerables oportunidades para formarse sobre
alimentacin saludable y prctica de actividad fsica y deporte, constituyendo uno de los
lugares ms eficaces para modificar los estilos de vida de los adolescentes (Delgado y
Tercedor, 2002). Pero todava existen centros de secundaria en nuestro pas en los que los
alumnos son sujetos pasivos, es decir, se les explican unos contenidos tericos que no son
978-84-695-8363-0
978
significativos para ellos o que luego no se ponen en prctica. Adems, tampoco se les
conciencia de la posibilidad de practicar actividad fsica fuera del horario lectivo, de la
importancia de llevar una dieta equilibrada, as como de respetar las horas de descanso. Como
podemos observar en el presente proyecto, cuando un alumno adquiere roles importantes y
responsabilidades en el desarrollo de las actividades, la implicacin, participacin y
motivacin por parte de ste, es mucho mayor. Por tanto, si queremos aspirar a tener una
sociedad saludable en el futuro, nuestra actuacin debe ser determinante y conjunta.
Por otro lado, se debera hacer ms hincapi en el uso de las tecnologas, sobre todo en
la utilizacin de buscadores, navegar por la red ya que muchos adolescentes utilizan
diariamente el PC, pero la mayora desconocen cmo buscar informacin til o qu pginas
son fiables, lo que podra ocasionar problemas.
Finalmente, debido a la situacin econmica de nuestro pas, el dominio de los
diferentes idiomas se considera una va de escape para aumentar las posibilidades de mejora
futuras. Actualmente, existe un gran porcentaje de alumnos que no dominan los idiomas
internacionales, ni siquiera las lenguas cooficiales de la propia comunidad. Esto es debido a
que el profesorado no ofrece un trabajo interdisciplinar, sino que cada contenido, tiene su
materia correspondiente. Sin olvidar las zonas de la Comunidad Valenciana en las que el
alumnado cuenta con la posibilidad de exentarse del valenciano. Por tanto, se debe incidir en
el trabajo constante de los diferentes idiomas, ya que esto puede abrir mayores y mejores
oportunidades en su futuro.
Referencias
Castilla A. y Daz, J.A. (2008). La Sociedad de la Informacin en Espaa (Tendencias,
Previsiones y Escenarios). Madrid: Biblioteca Nueva
Delgado, M. (1999). Educacin para la salud en educacin fsica: concreciones curriculares.
Actas en CD-ROM de las I Jornadas Andaluzas sobre Actividad Fsica y salud.
Granada.
Delgado, M. y Tercedor, P. (2002). Estrategias de intervencin en educacin para la salud
desde la Educacin Fsica. Barcelona: Publicaciones INDE.
Daz, J. A. (2007) Tecnologas de la informacin en los hogares espaoles. Madrid: Sistema.
Feinstein, C. y Sorosky A. (1998). Trastornos en la alimentacin. Col. Villa Guadalupe.
Jensen, E. (2000). Learning with the body in mind. San Diego: Brain Store.
LOE (2006). Ley Orgnica 2/2006, de 3 de mayo, de Educacin. Boletn Oficial del Estado,
04/05/2006.
EROSKI CONSUMER, el diario del consumidor (2013). Recuperado de www.consumer.es
My ASICS (2013). Recuperado de www.my.asics.es
Polar electro (2013). Recuperado de www.polarpersonaltrainer.com
978-84-695-8363-0
979
Resumen
En este trabajo presentamos los resultados y conclusiones obtenidos sobre la repercusin en
el aprendizaje estratgico y en el desarrollo de competencias de la participacin del
alumnado en prcticas de e-evaluacin entre iguales. Estas prcticas se enmarcan en la
concepcin terica de la evaluacin orientada al aprendizaje (EOA) (Carless, Joughin y
Mok, 2006) y la evaluacin sostenible (Boud, 2000). El proceso llevado a cabo consista en
disear e implementar prcticas de e-evaluacin entre iguales en seis asignaturas de la
Universidad de Cdiz y, posteriormente, recoger informacin sobre las implicaciones para el
aprendizaje de esta experiencia. De una muestra invitada de 195 alumnos a los que dirigimos
un cuestionario estructurado elaborado para tal fin, los datos analizados se extraen de una
muestra productora de 118 estudiantes. Los resultados obtenidos giran en torno al hallazgo
de los beneficios para el aprendizaje del alumnado de este tipo de propuestas.
Descriptores: e-Evaluacin entre iguales, Evaluacin orientada al aprendizaje, Tareas de
evaluacin, Retroalimentacin, Tecnologas de la informacin y la comunicacin.
Abstract
In this paper we present the results on the consequences that students participation in peer eassessment practices have on strategic learning and competence development. These
practices are framed within the learning oriented assessment framework (LOAF) (Carless,
Joughin & Mok, 2006) and sustainable assessment (Boud, 2000). The process consisted on
designing and implementing learning e-assessment practices in six modules at the University
of Cdiz and, afterwards, gather information about the implications of such practices in
students learning. The sample was composed of 118 students, who answered a questionnaire.
The results obtained show the benefits of these type of proposals for students learning and
training.
Keywords: Peer e-assessment, Learning-oriented assessment, Assessment tasks, Feedback,
Information and communications technology.
978-84-695-8363-0
980
Introduccin
Es evidente que hay una clara necesidad de repensar los sistemas y procedimientos de
evaluacin que se desarrollan en las aulas universitarias, no slo por las nuevas exigencias
del Espacio Europeo de Educacin Superior donde el foco de atencin cambia de la
enseanza del docente al aprendizaje del estudiante, sino tambin porque la evaluacin
condiciona cmo y qu es lo que los estudiantes estudian y/o aprenden (Boud y Molloy,
2012), convirtindose en uno de los medios ms importantes para el cambio y la innovacin.
Este planteamiento lo alineamos con el concepto de Evaluacin Orientada al Aprendizaje
(EOA), que como sostienen Gmez, Rodrguez e Ibarra (2011, p. 30), es una evaluacin
apoyada en una concepcin abierta, flexible y compartida del conocimiento, que centra la
atencin en el uso de estrategias de evaluacin que promueven y maximizan las
oportunidades de aprendizaje de los estudiantes, un aprendizaje estratgico y competencial,
en contraposicin a la certificacin o validacin de los mismos a travs de la medicin por
parte del profesorado. Y tambin con el concepto de evaluacin sostenible que, como declara
Boud (2000), es una evaluacin que permite desarrollar en el estudiante la capacidad de
poner en juego de forma autnoma estrategias para aprender por s mismo a lo largo de toda
la vida (aprendizaje estratgico y competencias profesionales), sin necesidad de tener un
referente externo y constante. Estas conceptualizaciones se apoyan en tres requisitos
fundamentales (Carless, Joughin y Mok, 2006):
-
Y la retroalimentacin.
978-84-695-8363-0
981
les demanda a los estudiantes. Un examen al uso o una prueba objetiva estn ms alineados
con el aprendizaje memorstico y/o comprensivo que otro tipo de tareas de evaluacin como
son el desarrollo de un proyecto de investigacin o de simulacin de creacin de una
empresa, que demandan, adems de estos, un tipo de aprendizaje ms estratgico y ms
cercano al desempeo laboral. Del mismo modo, la tarea de evaluacin favorece el
aprendizaje estratgico en la medida en que se apoye ms en el extremo del trabajo
colaborativo del continuo de la naturaleza de la tarea que en el de la competitividad (Carless,
2009). En este caso concreto, hemos implementado proyectos tutorados a elaborar
conjuntamente como tarea de evaluacin.
Los tres pilares en que se apoya nuestra experiencia: la participacin de los
estudiantes en la evaluacin, la retroalimentacin y el desarrollo de tareas autnticas, tienen
como eje transversal el uso de las tecnologas del conocimiento y el aprendizaje, conscientes
de la necesidad de la enseanza de su utilizacin efectiva por parte de los estudiantes, de la
presencia en la universidad de plataformas virtuales para la enseanza y el aprendizaje y de
sus potencialidades para la presentacin de las actividades, las tareas de evaluacin y el
registro de las respuestas. Concretamente, utilizamos la herramienta Web EvalCOMIX y su
integracin en la plataforma e-Learning moodle, que permite la creacin y uso de distintos
instrumentos de evaluacin (listas de control, escalas de valoracin, argumentarios
evaluativos, rbricas, etc.) en las actividades de Moodle por parte de los docentes y los
estudiantes, y que introduce adems de la evaluacin del profesor, la posibilidad de la
autoevaluacin del alumnado y la evaluacin entre iguales.
Estos supuestos tericos son organizados y llevados a la prctica a travs del diseo
procedimientos de evaluacin (Figura 1), entendidos stos como la especificacin de tareas
y/o actividades a realizar por profesor y estudiante para conocer y valorar el nivel
competencial del estudiante, y que incluye especificaciones sobre las tareas de evaluacin a
realizar por el alumnado, los medios de evaluacin que se exigen (productos o actuaciones de
aprendizaje), las modalidades de evaluacin, los criterios de evaluacin de la tarea, y los
instrumentos. Tambin se incluye un apartado especfico sobre el modo en cmo se
desarrollar la retroalimentacin (Rodrguez e Ibarra, 2011, p. 73).
978-84-695-8363-0
982
Las variables descriptivas nos muestran el mapa general del alumnado participante en
la investigacin, los cuales eran en un 82,2% del sexo femenino, y un 17,8% del sexo
masculino. Eran estudiantes en su mayora de la modalidad presencial, aunque con uso
978-84-695-8363-0
983
978-84-695-8363-0
tem
funcional/aplicado)
iv.
Desarrollar competencias sobre el trabajo en equipo
v.
Desarrollar competencias sobre la resolucin de problemas
vi.
Desarrollar competencias sobre el uso de la tecnologas para el conocimientos y el
aprendizaje
vii.
Desarrollar competencias sobre la planificacin (establecer objetivos y disear en el
tiempo actividades, recursos y prioridades)
viii.
Desarrollar competencias relacionadas con la bsqueda de informacin, transmisin
y comprensin de conocimientos
9.El empleo de las herramientas del campus virtual (cuestionarios, foros, EvalCOMIX):
i.
Facilita la realizacin de la evaluacin entre iguales
ii.
Favorece la implicacin de todos los compaeros/as en la realizacin de la
evaluacin entre iguales
iii.
Me ha permitido conocer en tiempo y forma la valoracin de mi trabajo por los
compaeros/as favoreciendo la utilidad de dicha informacin (aplicabilidadinmediatez)
iv.
Me ha resultado complicado
v.
Favorece mi aprendizaje (valor aadido)
10.Es ms adecuada la utilizacin de herramientas tecnolgicas (cuestionarios, foros,
EvalCOMIX) alojadas en el campus virtual para la evaluacin entre iguales que otras
herramientas no virtuales (lpiz y papel)
984
Media
4,3814
4,3051
4,3390
4,3814
4,5000
4,3644
4,4831
4,1102
3,0169
4,3051
4,2627
978-84-695-8363-0
985
Como aspecto negativo, sealar que casi la mitad del alumnado (45,8%) piensa que
evaluar la ejecucin/tareas de los compaeros conlleva que los estudiantes menos implicados
copien buenas tareas, aspecto que en muchas ocasiones hace que tanto el profesorado como
el alumnado rechacen a priori este tipo de evaluacin.
Discusin
Con esta experiencia pretendamos adems de favorecer el aprendizaje estratgico del
alumnado y el desarrollo de competencias profesionales, analizar y apoyar procesos de
innovacin en la evaluacin del aprendizaje del alumnado universitario. Introducir nuevos
planteamientos de evaluacin conlleva en ocasiones inseguridad, no slo por la falta de
formacin especfica sobre procesos innovadores en evaluacin, sino por el desconocimiento
de los resultados en el aprendizaje de los estudiantes de este tipo de prcticas. La prueba
objetiva, el examen, da mayor seguridad no slo a los docentes, sino tambin a los
estudiantes-, caemos en el espejismo de creer que si el alumnado lo supera es que ha
conseguido los objetivos de la materia y con ello, las competencias que lo harn precisamente
eso, competente, para el desarrollo de su desempeo laboral. Por ello, consideramos que con
este tipo de experiencias de accin e investigacin sobre la e-evaluacin entre iguales
diseadas e implementadas conjuntamente por varios profesores, obtenemos varias ventajas:
-
Demostrar, obtener evidencias, de que estas nuevas prcticas funcionan, que son costosas
en tiempo, esfuerzo y compromiso tanto para los docentes como para los discentes, pero
que al final se consigue mejorar el aprendizaje de estrategias y competencias.
Por ltimo, sealar que esta investigacin podra ampliarse con la realizacin de
grupos de discusin formados por el alumnado participante, para completar con informacin
cualitativa los datos estadsticos obtenidos a travs del cuestionario. Igualmente, tanto para
que los alumnos como el profesorado se impliquen en el desarrollo de esta compleja y
comprometida forma de trabajar es preciso que sean conscientes de la necesidad de una
formacin en temas de evaluacin que les capacite a ser altamente sistemticos en la
planificacin de las tareas y los tiempos.
Referencias
Boud, D. (2000). Sustainable assessment: rethinking assessment for the learning society.
Studies in Continuing Education, 22(2), 151-167.
Boud, D. y Molloy, E. (2012). Feedback in higher and professional education. London:
Routledge.
Carless, D. (2009). Learning-oriented assessment: principles, practice and a project. En L. H.
978-84-695-8363-0
986
978-84-695-8363-0
987
Resumen
El presente estudio analiza la importancia que juegan los valores sobre la inclusin e
interculturalidad en los futuros profesionales de educacin tanto en funcin de su titulacin
de estudios, gnero y edad. Para ello, se elabor un cuestionario que utiliza escalas tipo
lickert de 45 tems siguiendo las directrices de la Gua Index for Inclusion (Booth y Ainscow,
2000). La muestra est compuesta por estudiantes de Bachillerato, universitarios de grado y
posgrado de Tenerife (Islas Canarias). Esta Investigacin, realizada desde la perspectiva de
los implicados mencionados, ha permitido conocer la actitud general que los sujetos tienen
hacia la educacin inclusiva e intercultural, as como las barreras conceptuales, declarativas
y estratgicas que permiten desarrollar de forma ptica estos contenidos.
Descriptores: Inclusin, interculturalidad, diversidad, Index for Inclusion.
Abstract
The actual study carried out analises the importance that the values about interculturality
and inclusion play regarding the professional future on educationaL system, taking into
account the different certificates, genre and age that students may have.To do so,we have
made a quiz that uses types lickert of about 45 items following the rules of "index guide for
inclusion " .This study is composed of bachelor students and also by students of post
University studies in Tenerife, Canary Islands. This research, made from the perspective of
the people involved who have been already mentioned,has allowed us to know the general
attitude that those people involved have towards the inclusive and the intercultural education
as well as the conceptual, declarative and strategical barriers which allow to develop these
contents in an optical way.
Keywords: Inclusion, interculturality, diversity, Index for Inclusion.
Introduccin
Esta comunicacin forma parte del anlisis y estudio del Proyecto de Investigacin
I+D+i Islas Canarias: Inclusin e Interculturalidad (I.C.I.I.) (estudio sobre actitudes,
competencias y tecnologas para la inclusin y la interculturalidad en centros educativos), el
cual pretende minimizar barreras hacia el aprendizaje y la participacin (Wedel, 2008), y
maximizar y hacer efectivos los apoyos y recursos familiares, docentes y sociales (Lindsay,
2007), a partir del cambio de actitudes (Avramidis y Norwich, 2002), la adquisicin de
competencias y el uso de lenguajes audiovisuales y pantallas en la tecnologa informativa para
978-84-695-8363-0
988
978-84-695-8363-0
989
Figura 1: Gnero
Figura 2: Edad
978-84-695-8363-0
990
Se les administr como instrumento para el primer objetivo una adaptacin de la Gua
Index for Inclusion convertida en cuestionario (CAII), ya previamente validado en estudios
previos para realizar un anlisis cuantitativo de diferencias de medias y contrastes
estadsticos, a travs de tres dimensiones fundamentales: Cultura, Poltica y Prcticas
Inclusivas (45 tems). El anlisis de datos se llev a cabo tras el oportuno vaciado de datos
mediante el programa estadstico SPSS (ver.19) a travs del cual realizamos la descripcin de
datos y las comparaciones estadsticas pertinentes. Se obtuvo una elevada fiabilidad del
instrumento mediante el alfa de Cronbach (=.921), de forma que el cuestionario midi lo que
pretenda medir.
Para la recogida de datos de los estudiantes de Bachillerato (EB) se procedi
asistiendo a tres Institutos elegidos aleatoriamente. Para la muestra de estudiantes
universitarios de las titulaciones de Grado de Maestro de Educacin Infantil (EI) y Educacin
Primaria (EP), y estudiantes del Mster de Formacin del Profesorado (MP) se asisti a las
asignaturas obligatorias durante el curso 2010/2011. Para todos los casos se solicit
informacin al profesor responsable. Se explicaron idnticas instrucciones y se otorg treinta
minutos para su cumplimentacin. Para las entrevistas se acord con los 5 sujetos de cada
nivel de enseanza directamente, explicndoles el procedimiento y el motivo. Para la
consecucin del segundo objetivo se llevaron a cabo 15 entrevistas semi-estructuradas
estudiadas mediante anlisis de contenido. El instrumento empleado fue el propio Index del
que se obtuvieron categoras y preguntas abiertas para realizar a los estudiantes. En este caso,
el anlisis de datos se centr en analizar las entrevistas, categorizarlas mediante el Atlas.ti y
ordenar familias de redes entre los conceptos y actitudes obtenidos.
Resultados
Para responder al objetivo 1 se analiz el grado de asociacin entre variables, el cual
ha sido calculado mediante el estadstico t de Student en los casos de tener 2 variables (gnero
y experiencia intercultural), y el anlisis de varianza (ANOVA) para los casos con tres o ms
variables (edad, nivel de enseanza), teniendo en cuenta que, para la existencia de igualdad de
varianzas el p-valor ha de ser igual o mayor a .05, y para aceptar la hiptesis de igualdad de
medias el p-valor ha de ser mayor a .05. En las variables analizadas mediante el ANOVA,
que nos han dado diferencia de medias, hemos aplicado las pruebas post-hoc. Para los grupos
con varianzas iguales, el post-hoc aplicado ha sido Tukey, considerndolo la mejor medida
para detectar de manera ms eficaz las diferencias significativas.
La Tabla 1 refleja el nmero de variables analizadas que presentan diferencia de
medias segn Gnero y Experiencia intercultural y que a modo de ejemplo, en la variable
Gnero, podemos indicar que las mujeres dan mayor importancia a todos los tems excepto
978-84-695-8363-0
991
que el centro se esfuerza en disminuir prcticas discriminatorias que es superada por los
hombres. Respecto a la Experiencia Intercultural, a mayor experiencia en interculturalidad en
aos, se tiende a otorgar ms importancia a los tems del cuestionario.
Tabla 1
Rasgos significativos de asociacin segn estadstico t de Student
Medida
p<
Media
DT
DT
total
Gnero
Construir Comunidad
-4.806
0.000
V= 3.60
M=3.76
V=.597
M=.472
0.511
-3.908
0.000
V=2.88
M=3.10
V=.939
M=.915
0.926
0.078
-6.342
0.000
V=3.16
M=3.43
V=.758
M=.652
0.689
0.08
-3.750
0.00
V=3.03
M=3.23
V=.837
M=.836
0.840
-3.441
0.01
V=3.18
M=3.35
V=.812
M=.774
0.787
0.000
-2.778
0.03
V=6.61
M=3.61
V=.595
M=.526
0.545
0.000
-3.383
0.000
V=3.37
M=3.53
V=.805
M=.664
0.705
El centro hace que sus instalaciones sean fsicamente accesibles para todos. 0.000
-3.718
0.000
V=3.63
M=3.66
V=.591
M=.479
0.512
-5.795
0.000
V=3.35
M=3.58
V=.672
M=.617
0.639
0.000
0.000
-5.144
0.000
V=3.30
M=3.52
V=.729
M=.618
0.654
0.000
-4.124
0.000
V=3.39
M=3.57
V=.730
M=.606
0.644
Se trabaja para reducir las barreras al aprendizaje y partic ipacin de los 0.000
alumnos.
-5.043
0.000
V=3.35
M=3.57
V=.730
M=.637
0.668
0.000
-3.756
0.000
V=3.48
M=3.64
V=.689
M=.576
0.609
0.01
-2.439
0.010
V=3.37
M=3.49
V=.811
M=.731
0.754
0.000
-2.929
0.002
V=3.48
M=3.59
V=.676
M=.584
0.610
0.00
-5.657
0.000
V=3.46
M=3.68
V=.667
M=.548
0.598
0.28
-3.267
0.001
V=3.09
M=3.26
V=.906
M=.813
0.840
0.000
-3.815
0.000
V=3.40
M=3.56
V=.699
M=.654
0.633
0.015
-3.481
0.000
V=3.30
M=3.47
V=.776
M=.685
0.712
0.000
-4.827
0.000
V=3.44
M=3.64
V=.711
M=.586
0.625
0.000
-3.314
0.040
0-5=3.50
6 +=3.82
0-5=.642
6 +=.393
0.641
0.000
-3.441
0.023
0-5=3.49
6 +=3.82
0-5=.599
6 +=.393
0.598
0.000
-3.404
0.014
0-5=3.63
6 +=3.88
0-5=.590
6 +=.332
0.588
Movilizar recursos
Movilizar recursos
978-84-695-8363-0
992
Tabla 1
Rasgos significativos de asociacin segn estadstico t de Student
Medida
p<
Media
DT
DT
total
0.000
-4.144
0.020
0-5=3.42
6 +=3.82
0-5=.714
6 +=.393
0.712
0.000
-5.105
0.011
0-5=3.46
6 +=3.88
0-5=.685
6 +=.332
0.683
Media
DT
13-17=2.50
18-22=2.98
23-27=3.25
28-32=3.11
33-40=2.77
.923
.934
.876
.838
.994
13-17=3.16
18-22=3.47
23-27=3.57
28-32=3.65
33-40=3.63
.754
.607
.591
.635
.640
0.205
13-17=2.97
18-22=3.23
23-27=3.39
28-32=3.51
33-40=3.52
.944
.829
.769
.808
.772
0.785
18-22=3.17
28-32=3.51
.850
.772
Levene
gl
0.766
0.402
p<
Post hoc
Tukey
Construir Comunidad
Edad
Existe colaboracin entre el profesorado y las familias.
978-84-695-8363-0
993
Tabla 2
Rasgos significativos de asociacin segn estadstico ANOVA
Medida
p<
Post hoc
Tukey
Media
DT
Levene
gl
0.400
.692
.671
0.352
.822
.747
EI=3.17
ES=3.35
978-84-695-8363-0
994
978-84-695-8363-0
995
Gill, J. (2008). Social Inclusion for South Australian schooling? Trying to reconcile the
promise and the practice. Journal of Education Policy, 23(5), 453-467.
Warnock, H. M. (1978). Special educational needs. Report of the Commitee of Enquiry into
the education of de handicapped children and young people. London: HM Stationery
Office.
Alegre, O.M. (2006). Evaluacin del programa de posgrado Educar en la diversidad por
parte de los profesores participantes. Revista de Educacin, 340, 299-340.
Domnguez, M. C. (2006). Investigacin y formacin del profesorado en una sociedad
intercultural. Madrid: Universitas.
Morrison, R. (1999). Picture this! Using portfolios to facilitate the inclusion of children in
preeschool settings. Early Childhood Education Journal, 27(1), 45-48.
Durn, D., Echeita; G., Gin, C., Miquel, E., Ruiz, C. y Sandoval, M. (2005). Primeras
experiencias de uso de la gua para la evaluacin y mejora de la educacin inclusiva
(index for inclusion) en el estado espaol. Revista Electrnica Iberoamericana sobre
Calidad, Eficacia y Cambio en Educacin, 3(1), 464-467.
Arteaga, B., y Garca, M. (2008). La formacin de competencias docentes para incorporar
estrategias adaptativas en el aula. Revista Complutense de Educacin, 19(2), 253-274.
Carrasco, V. y Surez, C. (2010). Successful school management in contexts with challenges
(some lessons from practice). Journal of Human Sport & Exercise, 5(3), 418-429.
Alegre, O.M. y Villar, L.M. (2009). Evaluation of a 10-year special education masters degree
program : the case of La Laguna University. International Journal of Special
Education, 24(2), 116-129.
Gay, G. (2011). Acting on beliefs in teacher education for cultural diversity. Journal of
Teacher Education, 61(1-2), 143-162.
978-84-695-8363-0
996
Resumen
En este estudio se evala la actitud de los adolescentes de un instituto hacia las personas con
discapacidad intelectual antes y despus de una pequea intervencin educativa, consistente
en la realizacin de una charla, impartida por una mediadora y dos jvenes con
discapacidad intelectual, donde se inform sobre la filosofa de la Escuela de Vida,
basndose en las historias contadas por sus propios protagonistas. La investigacin se ha
llevado a cabo mediante un diseo preexperimental de un solo grupo con pretest-postest,
utilizando dos cuestionarios. Los resultados indican que los jvenes participantes en el
estudio poseen inicialmente una actitud entre aceptable y alta hacia las personas con
discapacidad. Tras la intervencin, los estudiantes cambiaron positivamente dicha actitud
hasta alcanzar un nivel valorado entre alto y muy alto. Estas diferencias resultaron ser
estadsticamente significativas a nivel global y en la mayora de los tems del cuestionario.
Descriptores: Discapacidad intelectual, Escuela de Vida, Viviendas Compartidas,
discriminacin, integracin socio-laboral.
Abstract
This study assesses the attitudes of adolescents of an institute, to people with intellectual
disability before and after a small educational intervention, namely the realization of a talk
delivered by a mediator and two youths with intellectual disabilities, where it was reported on
the philosophy of the School of Life, based on the stories told by the protagonists. The
research was conducted using a pre-experimental design with a single group pretest-posttest,
using two questionnaires. The results have shown that the young participants in the study
initially possess an attitude towards people with disabilities, between acceptable and
considered high. Following the intervention, students positively changed this attitude to a
level valued between high and very high. These differences were statistically significant
globally and in most questionnaire items.
Keywords: Intellectual Disability, School Life, Shared Housing, discrimination, social and
labor integration.
Introduccin
A lo largo de los siglos se han desarrollado diferentes actitudes y formas de entender la
discapacidad intelectual, que han ido reflejndose en la disposicin de atencin y trato hacia las
978-84-695-8363-0
997
mismas. En pleno siglo XXI, la integracin social y la insercin laboral de estas personas an no
son realidades tangibles en nuestra sociedad (Parra, 2011). Cierto es que la integracin sociolaboral de las personas con discapacidad intelectual est en auge y cada vez cobra ms
importancia en nuestros contextos ms cotidianos, dada la gran necesidad que presentan estas
personas de una vida independiente y autnoma (Naciones Unidas, 2006; DOWN ESPAA,
2010). Pero, aunque se van eliminando los prejuicios y el rechazo de forma progresiva (Stainton y
Clare, 2012), an existe desconfianza, y falta de valoracin positiva hacia este colectivo. De
acuerdo con Pereyra (2003), la sociedad sigue viendo a estas personas como individuos
especiales, incapaces de hacer cosas por s mismas, de entender o de comunicarse y de tomar sus
propias decisiones (Saaltink et al., 2012). Todava son consideradas personas en las que no se
puede confiar y a las que se puede engaar fcilmente.
Entre las razones que podran explicar esta circunstancia se puede destacar el
desconocimiento y la desinformacin de las capacidades que puede alcanzar una persona con
discapacidad intelectual, as como los logros que puede llegar a conseguir autnomamente.
Aunque podamos tener diferentes caractersticas, a todos nos reconforta que nos reconozcan
nuestros derechos y nos acepten tal y como somos, tolerando las diferencias individuales. Todo
ello al final nos conduce a un mundo de respeto, de derecho y de igualdad, a la vez que a la
diferencia. En este sentido, la autodeterminacin, entendida como la capacidad de elegir y realizar
elecciones en lugar de que otras personas o factores sean los determinantes de las propias acciones
(Ryan y Deci, 2000), es un concepto clave sobre el que se han venido sentando las bases para
promover y aumentar la calidad de vida y la participacin social de las personas con discapacidad
(Wehmeyer, 2006).
Por otro lado, la interrelacin de la comunidad y sobre todo de las instituciones escolares
con los jvenes resulta imprescindible para el logro de los altos propsitos de la inclusin y de la
tolerancia hacia la diversidad (Lozano y Etxebarria, 2007), pudindose mejorar las actitudes
positivas de los jvenes hacia estas personas cuando se tiene la posibilidad de tener un contacto
real con ellas (Muratori, Guntn, y Delfino, 2010). En este sentido los agentes implicados en la
formacin de los ms jvenes tienen una ardua tarea para educar a las generaciones venideras en
el desarrollo de valores humanos y comprometidos con la dignificacin plena del hombre y con el
logro de su felicidad y mxima realizacin personal y social (Bell, Illn y Benito, 2010).
Los ltimos estudios ms novedosos en discapacidad intelectual abogan por un innovador
paradigma que deja de lado anteriores concepciones obsoletas o excluyentes permitiendo a las
personas con discapacidad que quieran salir de la trampa que supone el sistema tradicional de
rehabilitacin, recuperar su libertad y ser protagonistas de sus propios destinos individuales
(Garca, 2003: 29). Estos estudios intentan reeducar a la sociedad en temas tan complejos como lo
son las tradicionales concepciones sobre discapacidad y las actitudes que se poseen hacia las
personas con discapacidad intelectual (Shaver et al., 1989).
La Fundacin Sndrome de Down de la Regin de Murcia (FUNDOWN) y en concreto los
proyectos que desde ella surgen, van encaminados a la erradicacin de estas malas prcticas a
travs de la denominada Escuela de Vida (Illn, 2010). As, esta entidad sin nimo de lucro
tiene el objetivo de promover y realizar todas las actividades que puedan contribuir a la mejora de
las condiciones de vida y procurar la plena integracin familiar, social y laboral y el desarrollo de
una vida normal. Uno de los programas ms innovadores de la fundacin es el llamado
Viviendas Compartidas, las cuales constituyen un escenario eminentemente educativo, de
convivencia temporal, donde se producen procesos de enseanza-aprendizaje encaminados a
978-84-695-8363-0
998
conseguir una vida adulta lo ms autnoma e independiente posible, y en el que los jvenes sin
discapacidad ejercen el papel de mediadores, nunca de cuidadores.
Las Viviendas Compartidas constituyen pues un medio idneo para fomentar la capacidad
de tomar decisiones, as como para promover que los jvenes, con y sin discapacidad, asuman sus
responsabilidades y las consecuencias de sus actos. Son un modelo de formacin para la vida
autnoma e independiente, en el que el aprendizaje se produce desde la mediacin y en el que los
jvenes ganan en confianza y credibilidad, sin dejar de lado a sus familias.
Con la intervencin proporcionada en este estudio se pretende que todos los jvenes
presentes en una charla sobre la Escuela de Vida, descubran el papel que juegan los voluntarios
como mediadores en los domicilios compartidos con las personas con discapacidad intelectual y
conozcan, un poco ms de cerca, la historia de algunos componentes de esta fundacin, lo que en
ella se trabaja, los objetivos que se persiguen y su novedosa filosofa: partidaria y promotora de
fomentar al mximo todas los puntos fuertes de las personas desde un punto de vista que reconoce
a la persona con discapacidad, su capacidad para tomar sus propias decisiones y llegar a controlar
su vida, intentando conseguir as, centrarse siempre en el lado positivo y las posibilidades de las
personas, no solo en los lmites que les pueden causar sus distintas discapacidades.
El objetivo general de esta investigacin es el siguiente: conocer la opinin de los jvenes
del Instituto de Enseanza Secundaria (IES) Vega del Argos hacia las personas con discapacidad
intelectual antes y despus de la intervencin.
Los objetivos especficos son cuatro:
1. Comprobar el grado de discriminacin de los jvenes hacia las personas con discapacidad
intelectual antes de conocer la Escuela de Vida de FUNDOWN.
2. Comprobar el grado de discriminacin de los jvenes hacia las personas con discapacidad
intelectual, despus de conocer la Escuela de Vida de FUNDOWN.
3. Comparar los resultados obtenidos entre el pretest y el postest.
4. Analizar los resultados en funcin del sexo y curso de los alumnos.
Metodologa
En la investigacin se invit a participar al alumnado de todos los cursos del IES Vega del
Argos -ao acadmico 2011/2012-, situado en el municipio de Cehegn (Murcia). El tipo de
muestreo ha sido no probabilstico casual. Finalmente, participaron en el estudio 260 estudiantes,
los cuales se encontraban en el lugar indicado en el momento de realizar la charla.
Para llevar a cabo la investigacin, se han utilizado como instrumentos de recogida de
informacin, dos cuestionarios aplicados a los estudiantes, de ocho y nueve tems
respectivamente. Sendos instrumentos estn formados por tems cerrados con una escala tipo
Likert de cinco grados, donde las preguntas hacen referencia al fenmeno social de la
discriminacin de las personas con discapacidad intelectual (anexo I). El estndar de la escala se
situ en el valor tres de la misma.
978-84-695-8363-0
999
O2
Tras solicitar los permisos pertinentes, en el estudio se realiz una primera observacin
cuya informacin fue recogida con el primer cuestionario. Seguidamente, se aplic la intervencin
consistente en una charla interactiva con el alumnado sobre la Escuela de Vida de FUNDOWN.
Tras la misma se volvi a aplicar el segundo cuestionario para recoger los cambios de actitud
hacia las personas con discapacidad intelectual producidos en los estudiantes. Finalmente se
procedi al anlisis de los datos, utilizando el paquete estadstico SPSS, versin 19.
Resultados
Respecto al grado de discriminacin de los jvenes hacia las personas con discapacidad
intelectual antes de conocer la Escuela de Vida de FUNDOWN -objetivo 1 de la investigacin-,
en el grfico 1 se muestran las medias de cada uno de los tems que integran el primer
cuestionario.
La puntuacin media global obtenida en el pretest ha sido de 3,85, lo que indica que el
alumnado, antes de la intervencin ya posee una actitud cercana a positiva hacia las personas con
discapacidad intelectual. Como se observa en el grfico 1, los dos tems mejor valorados por los
estudiantes han sido el primero -las personas con discapacidad intelectual tienen los mismos
derechos que las personas que no tienen ningn tipo de discapacidad- y el ltimo -una persona
con discapacidad intelectual puede ayudarme y ensearme algo-. Por el contrario, el tercero de los
tems -las personas con discapacidad intelectual pueden llegar a ser autnomas sin necesidad de
un tutor o cuidador que se ocupe de ellas y tome las decisiones- ha sido el peor valorado, por
debajo del estndar establecido. Esto indica que el alumnado comparte la errnea creencia de que
todas las personas con discapacidad deben ser vigiladas o atendidas por alguien sin discapacidad
que pueda ejercer por ella los juicios de valor que supongan una toma de decisiones.
En relacin al grado de discriminacin que poseen los jvenes hacia las personas con
discapacidad intelectual, despus de conocer la Escuela de Vida de FUNDOWN -objetivo 2-, en
el grfico 2, se muestran las medias resultantes de los tems que integran el segundo cuestionario.
978-84-695-8363-0
1000
Grfico 3. Comparacin de las medias de los tems de los cuestionarios (pretest y postest)
978-84-695-8363-0
1001
En todos los tems se observan diferencias entre los resultados del primer y segundo
cuestionario, a favor del postest. Dichas diferencias, tras aplicar la prueba t para muestras
relacionadas, han resultado ser estadsticamente significativas en todos los tems, a excepcin del
nmero 2 (P=,210) -las personas con discapacidad intelectual pueden estar en los mismos lugares
(instituto, discoteca, etc.) que el resto de personas sin discapacidad-.
Cabe destacar el cambio de actitud de los estudiantes hacia las personas con discapacidad
intelectual tras la intervencin en lo que respecta al contenido del sptimo tem -las personas con
discapacidad intelectual pueden vivir solas y controlar su propia vida de manera independiente-,
del quinto -las personas con discapacidad intelectual son capaces de manejar su propio dinero y
administrarse correctamente- y del tercero -las personas con discapacidad intelectual pueden
llegar a ser autnomas sin necesidad de un tutor o cuidador que se ocupe de ellas y tome las
decisiones-. En estos tres tems se aprecia ms de un punto de diferencia entre el pretest y el
postest, todos ellos estrechamente relacionados con la idea de que las personas con discapacidad
intelectual pueden llegar a conseguir una vida autnoma e independiente. Esto significa que
despus de la intervencin, los jvenes han interiorizado el mensaje que se quera transferir sobre
las posibilidades de las personas con discapacidad intelectual, transformando la mirada negativa
socialmente transmitida a lo largo de los aos. De este modo, los alumnos creen importante
confiar ms en la habilidad de las personas con discapacidad intelectual para conseguir objetivos
tan coloquiales e indispensables para el ser humano, pero tan complicados a veces, como es
independizarse y lograr una estabilidad bsica para un normal desarrollo de la vida. Asimismo, los
estudiantes creen ahora en la posible autonoma e independencia de estas personas, sin centrarse
en las limitaciones, sino otorgndole la mayor relevancia posible a sus capacidades y a todo lo que
s son capaces de lograr.
El ltimo tem, nicamente incluido en el segundo cuestionario -mi visin de las personas
con discapacidad intelectual ha cambiado despus de la charla sobre la Escuela de Vida de
FUNDOWN-, obtuvo una media bastante alta, que corrobora la utilidad de la informacin
ofrecida para promover la tolerancia hacia las personas con discapacidad intelectual e infundir
sobre los jvenes una mirada nueva y de mayor confianza, que ellos tambin en un futuro podrn
transmitir. Este propsito de incidir en las generaciones ms jvenes, es el primer paso para
romper con los tradicionalismos y prejuicios sociales que viene sufriendo este colectivo.
En relacin al cuarto objetivo de la investigacin, en el que nos planteamos analizar los
resultados de la misma en funcin del sexo y curso de los alumnos que han participado en la
misma, antes de la intervencin realizada, la prueba t de student para muestras independientes
puso de manifiesto la nula existencia de diferencias significativas (P=,217) respecto a la actitud
que poseen los estudiantes hacia las personas con discapacidad intelectual, en funcin del sexo, es
decir alumnos y alumnas valoran con un promedio muy parecido el grado de autonoma e
independencia que pueden llegar a conseguir estas personas.
En este mismo momento, tras la aplicacin del pretest, en relacin al curso en el que se
encuentran los alumnos, tras calcular el correspondiente anlisis de varianza -ANOVA de un
factor-, se comprueba que s existen diferencias significativas en relacin a la actitud de los
alumnos hacia las personas con discapacidad intelectual, en funcin del nivel educativo que
cursan (P=,002). Concretamente, dichas diferencias se encuentran entre el curso de 2 de ESO y 2
de Bachillerato (P=,003) a favor de este ltimo, as como entre 3 de ESO y 2 de Bachillerato
(P=,004) tambin a favor de los alumnos de mayor edad.
978-84-695-8363-0
1002
Despus de que los alumnos conozcan la Escuela de Vida, el postest evidencia que tampoco
existen diferencias significativas respecto a la actitud que stos poseen hacia las personas con
discapacidad intelectual, en funcin de su sexo (P=,259). Como consecuencia, tanto alumnos
como alumnas siguen valorando con un promedio similar las posibilidades de estas personas.
Siguiendo con el momento del postest, en funcin del curso al que pertenecen los
estudiantes, tampoco existen diferencias significativas (P=,154) en funcin de esta variable
despus de que los alumnos tomaran conciencia acerca del tema de la discapacidad intelectual
tratado en la charla sobre la Escuela de Vida.
Discusin
En esta investigacin ha sido clave conocer si existen o no variaciones en la actitud de los
jvenes participantes despus de darles a conocer una de las iniciativas nacionales ms
innovadoras e integradoras actualmente: la Escuela de Vida de la Fundacin Sndrome de Down y
el trabajo conjunto de voluntarios y personas con discapacidad intelectual para conseguir una
mayor inclusin en la comunidad, con el fin ltimo de lograr plena independencia y autonoma.
Si bien el punto de partida del alumnado fue de una actitud que se puede considerar como
cercana a positiva hacia las personas con discapacidad intelectual, dicha actitud aument
considerablemente una vez que tuvo lugar la pequea intervencin educativa mediante la
realizacin de la charla interactiva. Este cambio de actitud se ha producido como consecuencia de
la informacin bsica proporcionada durante la charla. Por lo tanto, nos parece crucial que los
jvenes conozcan las capacidades y posibilidades que las personas con discapacidad pueden llegar
a conseguir, contado por sus propios protagonistas.
Al contrario de lo que ocurri en una investigacin realizada por Muratori, Guntn, y
Delfino (2010), ni antes, ni despus de la intervencin se han encontrado diferencias significativas
en funcin del sexo, lo que indica que hombres y mujeres poseen actitudes similares hacia las
personas con discapacidad intelectual.
En relacin al nivel educativo, los resultados tras el pretest han puesto de manifiesto que los
alumnos que cursan 2 y 3 de ESO son los que mayoritariamente discriminan a estas personas,
mientras que los que ms confan en sus posibilidades son los estudiantes de 2 de Bachillerato, es
decir, la discriminacin disminuye con la edad -tambin al contrario de los resultados obtenidos
por Muratori, Guntn, y Delfino (2010)-. Por el contrario, en el postest, las diferencias encontradas
en funcin del curso, no han resultado ser estadsticamente significativas.
Como conclusin final de este estudio, insistimos en la necesidad de educar cuanto antes en
unos valores basados en la tolerancia, la igualdad y el pluralismo, combatiendo los estereotipos y
prejuicios y promoviendo la concienciacin de lo que pueden llegar a hacer las personas con
discapacidad intelectual desde su propia autonoma e independencia.
Referencias
Bell, R., Illn, N. y Benito, J. (2010). Familia-Escuela-Comunidad, pilares para la inclusin.
Revista Interuniversitaria de formacin del profesorado, 69, 47-58.
978-84-695-8363-0
1003
978-84-695-8363-0
1004
Wehmeyer, M. (2006). Self-determination and individuals whit severe disabilities: Reexaminig meanings and misinterpretations. Research and Practice in Severe Disabilities,
30, 112-120.
978-84-695-8363-0
1005
Resumen
Costa Rica es un pas con una democracia centenaria comprometida con el movimiento
internacional a favor de la educacin inclusiva. Desde su poltica y legislacin educativa, se
han promovido una gran variedad de servicios de apoyo destinados a garantizar aulas
ordinarias cada vez ms inclusivas. En este sentido, los profesores que trabajan en las
escuelas tienen sus propias percepciones acerca de las condiciones que son necesarias para
alcanzar este objetivo. Este trabajo presenta parte de los resultados de un estudio piloto en
escuelas pblicas de educacin primaria y secundaria en Cartagena, una de las provincias de
Costa Rica. El estudio analiz, desde una metodologa descriptiva basada en encuestas, la
visin de los profesores de estos centros en relacin con las condiciones en las que tiene
lugar la educacin inclusiva. Los resultados indican que los profesores demandan mejoras,
recursos materiales y la disponibilidad de tiempo y apoyos de los profesores especialistas
para atender el reto que supone la participacin de los estudiantes con necesidades
educativas especiales en las aulas inclusivas.
Descriptores: educacin inclusiva, opiniones del profesorado, recursos y apoyos.
Abstract
Costa Rica is a country with a centuries-old democracy, committed to the international
movement for inclusive education. Since its educational policy and legislation, has been
promoting and providing a range of support services designed to ensure that the ordinary
classroom becomes an ever more inclusive. In this regard, teachers who work in schools and
colleges have their perception of the conditions that are necessary to achieve this. This paper
presents part of the results of a pilot study in public primary schools and secondary schools in
Carthage, one of the provinces of Costa Rica. The study addressed from a descriptive
methodology using survey, the views of teachers of these centers in relation to the conditions
in which it takes place inclusive education. The results indicate that teachers claimed
improvements and material resources and time availability and support of specialist teachers
to meet the challenges of the participation of students with SEN in mainstream classrooms.
Keywords: inclusion, views of teachers, resources and support for inclusion.
978-84-695-8363-0
1006
Introduccin
Costa Rica es un pas centroamericano con una democracia centenaria, comprometido
con los principios de la educacin inclusiva. Con su poltica educativa y legislacin, ha
venido promoviendo y proveyendo una serie de servicios de apoyo tendientes a que el aula
ordinaria como unidad bsica del sistema educativo, se convierta en un espacio cada vez ms
inclusivo (Stough, 1997, 2003).
Este compromiso se ha traducido en un aumento significativo de alumnado con
necesidades educativas especiales (NEE) en las aulas ordinarias que previamente asistan a
servicios educativos ms segregados. Para el curso lectivo del 2009, ya el 85.5% (n = 90.387)
del alumnado con estas caractersticas estaba escolarizado en las aulas ordinarias con
servicios de apoyo mientras que slo un 14.49% (n = 15.884) reciba atencin directa
(educacin especial).
La atencin educativa del alumnado con necesidades educativas especiales vista desde
la perspectiva de la educacin inclusiva, compromete al sistema educativo en su conjunto en
los diferentes niveles y ciclos a dar respuesta a las necesidades de aprendizaje particulares de
estudiantes que enfrentan retos en el aprendizaje (Booth y Ainscow, 2002; Cardona, 2006;
FEAPS, 2009; Moliner, 2008; UNESCO, 2009).
La educacin inclusiva en este estudio se concibe ms que como una alternativa
metodolgica o una prctica educativa, como un eje transversal de la poltica educativa y
curricular, que busca que todas y todos tengan acceso y participacin en una educacin de
calidad en el marco de las aulas ordinarias. Por supuesto, esto implica la provisin oportuna,
la poblacin que as lo requiera, de los servicios de apoyo pedaggico pertinente as como las
ayudas tcnicas que garanticen una participacin en condiciones de equidad para todos y
todas.
Evidencia del compromiso por una educacin inclusiva, es el hecho de que en el ao
1990, en primaria y secundaria existan apenas 203 servicios de educacin especial en la
educacin regular. En 1997 esta cifra aument a 412, mientras que en el ao 2011 ya eran
2.261 los servicios de apoyo pedaggico fijos e itinerantes ubicados en centros educativos
ordinarios incluyendo la educacin pbica, privada y subvencionada (MEP, 2011). El
96.78% estaban ubicados en escuelas (centros educativos de primaria) y nicamente un 3.22%
en colegios (centros educativos de secundaria), lo cual evidencia que el desarrollo en primaria
y secundaria en este tema ha sido desigual.
Adicionalmente, es Interesante sealar que, entre el ao 2000 y el 2008 el nmero de
adecuaciones de acceso creciera en un 52.8% y el nmero de adecuaciones curriculares no
significativas pas de 26.048 a 72.027, con lo cual se refleja un importante esfuerzo por
responder a las NEE en el contexto del aula ordinaria en contraposicin con la tendencia a la
reubicacin del alumnado que enfrenta barreras para el aprendizaje en modalidades educativas
ms segregadas.
Con base en las cifras de alumnado con NEE que asiste a aulas ordinarias tanto en
primaria como en secundaria, as como en el nmero de adecuaciones curriculares aplicadas
anualmente se puede afirmar que el profesorado en ejercicio ha venido desarrollando
experiencias en torno a la inclusin. Estas experiencias generan a su vez, una perspectiva
978-84-695-8363-0
1007
muy relevante en torno a las medidas y actuaciones necesarias para alcanzar los objetivos de
la EPT (educacin para todos).
En los ltimos cinco aos, el sistema educativo costarricense experiment cambios
positivos, que inciden en el desarrollo de la educacin inclusiva. Por ejemplo, en la educacin
general bsica (primaria y tres primeros aos de secundaria) se fortalecieron los programas de
equidad y aument la retencin estudiantil (III Informe Estado de la Nacin, 2010). Aunado a
lo anterior, el pas ha ratificado la Convencin de los Derechos Humanos para las personas
con discapacidad (Asamblea Legislativa, 2008, ONU, 2007) y ha aprobado la nueva Poltica
Nacional en Discapacidad (CNREE, 2011) cuyos ejes en educacin son el fortalecimiento de
la educacin inclusiva, universal, accesible y de calidad. No obstante los evidentes avances en
cuanto al trabajo por una educacin pblica cada vez ms inclusiva, se carece de
investigaciones que den sustento a muchas de las medidas y actuaciones adoptadas a favor de
la inclusin.
La investigacin en torno a las percepciones y actitudes hacia la educacin inclusiva
ha sido una lnea de investigacin muy clara en el contexto de los esfuerzos por alcanzar una
educacin inclusiva (Cardona 2000, 2004, 2006, 2008; Chiner y Cardona, 2013; Cornoldi,
Terreni, Scruggs y Mastropieri, 1998; Wikins y Nietfeld, 2004). En este sentido, diversos
estudios afirman que las percepciones y actitudes del profesorado influyen directamente sobre
las prcticas educativas y constituyen un factor determinante para el xito acadmico de
todas y todos en el entorno del aula ordinaria (Garca y Rodrguez, 1993; Prez y Prieto,
1999, Echeta, Ainscow, y Alonso, 2004, Cardona, 2006, Chiner y Cardona, 2013).
Las opiniones del profesorado que ya ha tenido experiencia directa o indirectamente
en la atencin de alumnado con NEE en el contexto de las aulas ordinarias, reviste de una
particular importancia , puesto que, ofrece una visin concreta de los posibles aciertos y
desaciertos de la puesta en prctica de las polticas educativas. Asimismo conocer la
percepcin que tiene el profesorado en cuanto a las condiciones para llevar a la prctica la
educacin inclusiva significa una oportunidad para conocer algunas de las necesidades de
apoyo de parte de este colectivo.
En resumen ante la suficiente evidencia emprica en relacin con la relevancia de las
percepciones y opiniones del profesorado hacia la inclusin, en Costa Rica se adolece de
estudios que aborden tan importante temtica.
Ante esto en este trabajo se propuso conocer cul es la opinin que tiene el
profesorado de las condiciones para llevar a la prctica la educacin inclusiva en los centros
educativos pblicos de primaria y secundaria en Costa Rica?. Esta comunicacin presenta los
resultados de un estudio piloto en el cual se valid una escala de opinin tipo Likert con el
profesorado de centros pblicos de primaria y secundaria de una regin educativa de Costa
Rica.
Para responder a esta interrogante se dise, adapt y pilote una escala de opinin
acerca de la educacin inclusiva. Los resultados de este estudio son los que se presentan en la
presente comunicacin.
978-84-695-8363-0
1008
Mtodo
El abordaje metodolgico del problema planteado en el estudio se enmarc dentro de
un enfoque cuantitativo con un diseo no experimental y descriptivo tipo encuesta (McMillan
y Shumacher, 2005). La metodologa descriptiva mediante encuesta es un medio que se
permite la descripcin de percepciones y opiniones mediante datos cuantitativos.
Contexto y participantes
El estudio fue realizado con una muestra disponible de 126 profesoras/es de cuatro
centros educativos dos de primaria y dos de secundaria de las dos circunscripciones
administrativas de la provincia de Cartago, una de las siete provincias de Costa Rica.
Se acudi al total del profesorado de los cuatro centros educativos y se obtuvo una tasa
de respuesta del 76%. Del total de profesores consultados (N= 126) el 41% (n= 52) laboraban
en primaria y el 59% (n= 74) en secundaria. El 77% (n= 96) fueron mujeres y el 23% (n= 29)
hombres. Sus edades oscilaron entre los 22 y los 64 aos y la edad promedio fue de 40 aos
(DT = 9.9). La mayora contaba con el grado acadmico de licenciatura (84%) y en un
porcentaje menor tenan el nivel de maestra (9%) y diplomatura (6%). El promedio de aos
de experiencia del profesorado que particip en este estudio fue de 13.6 aos (D.T.= 6.9)
siendo la experiencia mnima 1 ao y la mxima 30 aos. La distribucin de la muestra por
Direccin Regional fue de 69% y 31% por cada una.
Variables e instrumento
Las variables de la investigacin fueron las percepciones y opiniones del profesorado
acerca de las condiciones para la educacin inclusiva. Estas opiniones se midieron con la
Escala de Opinin hacia la Educacin Inclusiva (Adaptacin Bravo y Cardona, 2010). Esta
escala estuvo dividida en dos partes. La primera contena las variables demogrficas: gnero,
edad, especialidad, grado acadmico, niveles en los cuales imparte docencia y aos de
experiencia. La segunda parte estaba compuesta por 26 reactivos (proposiciones que
expresan una idea relativa a la educacin inclusiva) a los cuales se responda expresando el
grado de acuerdo utilizando una escala tipo Likert (1=muy en desacuerdo, 2=en desacuerdo,
3=de acuerdo y 4=muy de acuerdo). De estos reactivos un total de nueve incluan
afirmaciones relativas a los recursos y apoyos disponibles en los centros educativos. El
instrumento fue diseado con base en otros similares utilizados en estudios previos en la
temtica (Cornoldi, Terreni, Scruggs y Mastropieri, 1998 y Cardona, 2006). Posteriormente,
se someti el instrumento al criterio de expertos como procedimiento para validar su
contenido (IVC= .98) consultando a 15 profesionales en el rea de la psicologa, orientacin,
educacin especial, educacin infantil, primaria y administracin educativa. Ocho de los
profesionales laboraban en universidades y los restantes siete, en servicios educativos en
atencin directa en la educacin pblica costarricense.
Procedimiento de recogida de los datos
Previo a la aplicacin del instrumento se negoci con la direccin de cada centro
educativo el acceso al profesorado. En uno de los cuatro centros se aplic la escala con el
profesorado durante una reunin de claustro (reunin de personal docente) lo cual facilit la
alta tasa de respuesta (87%). Se leyeron las instrucciones y se ofreci la oportunidad de
978-84-695-8363-0
1009
M
2.15
2.00
2.57
2.18
DT
1.07
1.01
1.09
.96
MD ED
%
%
20
36
27
44
14
24
16
47
DA
%
26
14
38
24
MDA
%
11
11
20
9
NS/NR
%
7
4
4
4
Las medias de los tems que midieron las opiniones en torno a los apoyos para la
educacin inclusiva oscilaron entre los valores 1.83 y 2.67 (M= 2.25, DT=1.12) lo cual
refleja que las opiniones del profesorado se ubican en torno al punto medio de la escala en
direccin moderadamente desfavorable sobre los apoyos para la educacin inclusiva. Llama
la atencin el alto porcentaje de 18% que no contest y la media de respuesta y alta
variabilidad (M = 1.83, DT = 1.26) en cuanto a la percepcin relativa al apoyo del profesorado
978-84-695-8363-0
1010
M
2.25
1.83
2.67
2.08
2.43
DT
1.05
1.26
1.14
1.00
1.18
MD
%
18
26
11
30
12
ED
%
33
21
20
30
25
DA MDA
%
%
33
11
26
9
38
26
28
8
36
19
NS/NR
%
6
18
6
3
9
Figura 1. Percepciones del profesorado acerca de las Condiciones para la educacin inclusiva
Discusin y conclusiones
Las opiniones del profesorado reflejan que un porcentaje considerable (36%)
considera que carece de la capacitacin suficiente as como de los recursos y materiales
(56%) para hacer frente a la educacin inclusiva de manera exitosa. Esta posicin concuerda
con lo que los resultados de estudios previos realizados tambin por medio de encuestas
(Ainscow, Howes, Farrell, Frankham, 2004; Barrientos, 2008; Garca Llamas, 2008; FEAPS,
2009; INICO, 2009).
En lo referente a los recursos, el profesorado nicamente expres una opinin
favorable (M = 2.57) sobre sus propias habilidades para atender al alumnado con NEE en el
aula ordinaria. Esto contrasta con la opinin desfavorable que tienen de los recursos y
978-84-695-8363-0
1011
978-84-695-8363-0
1012
978-84-695-8363-0
1013
Resumen
Este estudio analiza la percepcin que tienen los padres sobre la integracin de sus hijos con
discapacidad en el centro educativo. Esto se analiz segn el gnero de los padres, la etapa
de formacin (primaria, secundaria y universitaria) y la etapa en la que los hijos adquirieron
la discapacidad (sobrevenida o desde el nacimiento). Participaron 72 padres de hijos con
diferentes discapacidades. Para ello se dise un cuestionario ad hoc, que se llev a cabo de
forma voluntaria y annima. Los estudios indicaron que no todos los padres tienen
reacciones favorables a la situacin, reflejndose menos inclusin en etapas ms avanzadas
de formacin y en la discapacidad sobrevenida. Esto sugiere que an existen serios
obstculos para la obtencin de la inclusin total de las personas con discapacidad as como
en la creacin de una base positiva y fundamental en el contexto educativo.
Descriptores: discapacidad adquirida; discapacidad de desarrollo; percepcin de los
padres, la integracin educativa.
Abstract
This study examines the perception of parents on the integration of their disabled children at
school. The analysis follows the gender of the parents, cycle formative and t the stage at
which the children acquired disability (adquired or from birth). 72 parents of children with
different disabilities took part in this report. We complied an ad hoc questionnaire, which was
carried out voluntarily and anonymously. From these studies we found that not all parents
have favourable reactions to their situation. Results reflected differences in gender and type
of disability and some were not aware of any integration for their children on the part of the
educational department. This confirms that there are still serious obstacles in obtaining total
inclusion for those with disabilities and in creating a positive and fundamental basis within
the family and the educational world towards disability.
Keywords: adquired disability; developmental disability; parental perception; educational
integration.
Introduccin
Desde hace algunos aos, con el objetivo de posibilitar y garantizar la enseanza de
los alumnos con discapacidad, desde el mbito educativo se estn eliminando las barreras y
978-84-695-8363-0
1014
promoviendo las actuaciones necesarias para la integracin de estas personas. Sin embargo,
todava son muchos los casos en los que los estudiantes con discapacidad encuentran
impedimentos importantes para llevar una vida plena y participar en las actividades que
desarrollan las personas sin esta problemtica, siendo las barreras mentales del resto de
personas sin discapacidad uno de los mayores obstculos para su integracin. En este sentido,
multitud de estudios (Comisin Europea, 2007; Croot, Grant, Cooper y Mathers, 2008;
Mason, Pratt, Patel, Greydanus y Yahya, 2004; Thomas, 2001) enfatizan en los prejuicios
como los mayores causantes de la exclusin de estas personas.
Aunque no existe un amplio acuerdo en cuanto a la "causa" de los prejuicios y la
discriminacin, existe un consenso de que constituyen un comportamiento aprendido, por
ello, la mayora de autores interesados en el tema, han abordado el estudio de las actitudes
hacia las personas con discapacidad de los maestros y profesionales de la enseanza
(Alemany y Villuendas, 2004; Alonso, Navarro y Lidn, 2008; Luque y Rodrguez, 2008;
Suri, 2011) as como las actitudes del resto de compaeros sin discapacidad (Arnaiz, 2003;
Infante y Gmez, 2004; Frostad y Pijl, 2007; Suri, Bueno y Rosser, 2011; Verdugo, Arias y
Jenaro, 1994). En general, estos estudios se han llevado a cabo a travs de cuestionarios o
autoinformes dirigidos a los profesionales, a los estudiantes compaeros y a los propios
protagonistas, esto es a los estudiantes con discapacidad (Suri, 2012), y en ellos se indica la
existencia, todava enraizada, de actitudes discriminatorias hacia este colectivo. En este
sentido y como se ha mencionado en lneas anteriores, la familia es uno de los contextos ms
importantes en el contexto socioafectivo y educativo de los hijos. Desde la familia se
transfieren creencias y actitudes que pueden ayudar, potenciar y transformas experiencias
vividas en contexto familiar, educativo, y social.
Por tanto, conocer la percepcin de los padres acerca de las actitudes que observan del
entorno que rodea a sus hijos hacia estos, puede ayudar a comprender de forma ms
exhaustiva, la manera de fomentar unas actitudes ms favorables hacia la integracin de los
jvenes con discapacidad en el contexto educativo. En este sentido, y aunque no debemos
pasar por alto la subjetividad que conlleva el trmino de percepcin, es decir, una persona
puede percibir rechazo o discriminacin y sin embargo no ser cierto, pero sin duda, esta
percepcin debe alertarnos como requisito previo para considerar el fenmeno
correspondiente y, en su caso, aplicar programas de intervencin y accin psicopedaggica
dirigidos a la deteccin y modificacin de actitudes negativas hacia los estudiantes con
discapacidad.
A partir de estas consideraciones, en este trabajo se analiza si los padres de hijos con
esta problemtica, perciben por parte de los miembros de la comunidad educativa unas
actitudes favorables hacia la integracin de sus hijos. Esto se analiz segn el gnero de los
padres, del ciclo formativo (primaria, secundaria y universitaria) y la etapa en la que los hijos
adquirieron la discapacidad (nacimiento o sobrevenida).
Mtodo
Participantes
Participaron 72 padres de hijos con diferentes tipos de discapacidad. De ellos, 54.2%
(n=39) fueron madres y el 45.8% (33) padres. La edad oscil entre 26 y 65 aos, destacando
el rango entre 36 y 45 aos (44.4%). En cuanto al tipo de discapacidad de los hijos, el 41.7%
(30) tenan discapacidad sobrevenida y el 58.3% (n=42) discapacidad desde el nacimiento.
978-84-695-8363-0
1015
978-84-695-8363-0
1016
Figura 1. Percepcin de los padres ante la actitud del centro educativo sobre la discapacidad segn
el gnero de los padres
Al examinar los resultados de la percepcin que tienen los padres sobre las actitudes
hacia la integracin que tienen los miembros del centro educativo de sus hijos con
discapacidad en funcin del ciclo formativo, se observ que en algunas de las cuestiones los
padres percibieron actitudes discriminatorias. As, al centrar los resultados a la percepcin de
los padres hacia el profesorado fueron los padres de hijos que estudian en la universidad, los
que percibieron menor apoyo por parte del profesorado hacia a sus hijos. As, con respecto a
la percepcin de los padres sobre la actitud de los compaeros de sus hijos hacia estos, se
observ que los estudiantes que estudian secundaria fueron los que menos apoyaron a sus
hijos.
Tabla 1
Percepcin de los padres ante la actitud del centro educativo sobre la discapacidad segn el ciclo
formativo
Percepcin de los padres sobre la actitud
integradora hacia la discapacidad en el centro
educativo
Cree que le incomoda a los profesores tener a su
hijo con discapacidad en su clase?
Percibe que el profesorado cree que es difcil
impartirle clase a su hijo?
Cree que el profesorado tiene dificultades para
relacionarse con su hijo?
En general, cree que su hijo es apoyado por los
profesores?
Etapa
formativa
Primaria
Secundaria
Superiores
Primaria
Secundaria
Superiores
Primaria
Secundaria
Superiores
Primaria
Secundaria
28
34
10
28
34
10
28
34
10
28
34
4.39
4.41
4.30
4.21
4.29
4.40
2.46
1.88
2.60
2.79
2.29
D.T
.74
.74
.82
.63
.68
.52
1.53
1.17
1.07
1.23
1.19
Kruskal
Wallis
Sig.
1.152
.927
1.716
.699
4.875
.087
7.660
.052
978-84-695-8363-0
Superiores
Primaria
Secundaria
Superiores
Primaria
Secundaria
Superiores
Primaria
Secundaria
Superiores
Primaria
Secundaria
Superiores
Primaria
Secundaria
Superiores
Primaria
Secundaria
Superiores
10
28
34
10
28
34
10
28
34
10
28
34
10
28
34
10
28
34
10
1017
3.50
3.96
2.56
3.20
2.71
2.21
2.50
2.79
2.41
2.30
3.64
3.53
2.40
2.79
2.21
3.40
2.82
2.15
3.40
1.08
1.20
1.16
.79
1.21
.84
1.18
1.10
1.46
1.25
1.47
1.13
1.65
1.26
1.37
1.26
1.22
1.31
1.26
16.580
.000
3.128
.209
2.754
.252
5.328
.070
6.329
.042
7.937
.019
Con respecto al ltimo objetivo, esto es, al anlisis de las actitudes de los padres hacia
sus hijos con discapacidad en funcin de la etapa en la que se adquiere la discapacidad no
result significativamente diferente en la mayora de los tems en funcin del tipo de
discapacidad de los hijos, observndose que excepto en: Cree que le incomoda a los
profesores tener a su hijo con discapacidad en su clase? y en: Percibe que el profesorado cree
que es difcil impartirle clase a su hijo?, en los que los padres de hijos con discapacidad
sobrevenida indicaron actitudes ms desfavorables que los de hijos con discapacidad
intelectual, en el resto de tems, no influy esta variable.
Figura 2. Percepcin de los padres ante la actitud del centro educativo sobre la discapacidad segn
la etapa de la discapacidad
978-84-695-8363-0
1018
Discusin
En este estudio se ha tratado de profundizar en lo que perciben los padres de hijos con
discapacidad de los profesores y compaeros de los hijos con discapacidad hacia la
discapacidad. As, en los resultados se observa que los padres de hijos con discapacidad no se
muestran del todo satisfechos con el trato integrador hacia sus hijos. Como se comprueba,
estos resultados reflejan concordancia entre la percepcin de estos estudiantes con la realidad,
es decir, con lo que piensan los docentes. As, en otros estudios dedicados a las actitudes del
profesorado hacia los alumnos con discapacidad (Dengra, Durn y Verdugo, 1991; Luque y
Rodrguez, 2008; Salanova, Peir y Schaufeli, 2002; Suri, 2011), se refleja que todava
persisten actitudes desfavorables entre los docentes hacia la integracin del alumnado con
discapacidad. Esto, si se examina en funcin del gnero de los padres se observa que las
madres son algo ms negativas en sus actitudes que los padres. estos resultados estn en lnea
con los encontrados por Gmez Puerta y Cardona Molt, (2010). Es posible que las madres
estn ms atentas a las demandas y seales socioafectivas de los hijos que los padres, y de ah
a mayor vulnerabilidad ante cualquier indicio de discriminacin.
Tambin se encuentran diferencias en la percepcin de los padres en funcin de la
etapa educativa en la que estn estudiando los hijos con discapacidad. As, los resultados
reflejan que los padres reflejan mayor descontento con las actitudes integradoras del
profesorado universitario, mientras que al referirse a los compaeros de clase, este
descontento se acenta en secundaria. En este sentido, en etapas como primara y secundaria,
el profesorado puede conocer ms directamente la problemtica del alumnado puesto que
pasan varios cursos en el centro, sin embargo, cuando los estudiantes van a la universidad, la
independencia en el alumnado se hace ms obvia pudiendo no conocer el docente la
necesidades de los alumnos si no es de forma explcita. A su vez, la adolescencia, etapa de la
vida compleja, puede influir a la hora e que estos estudiantes se sientan integrados por el resto
de compaeros, de ah a que los padres perciban mas descontento que en otras etapas.
Con respecto a la percepcin que tienen los padres sobre las actitudes del profesorado
y de los compaeros del centro educativo en funcin de la etapa de la discapacidad, parece
que los padres tambin perciben actitudes algo negativas hacia la discapacidad,
independientemente de que padezcan una discapacidad adquirida en el nacimiento o
sobrevenida a lo largo de la vida. Una explicacin a estos resultados puede deberse a las
necesidades o demandas derivadas de la discapacidad de estos estudiantes. As, las
limitaciones fsicas y/o intelectuales y con ello, a que el profesorado tenga que dedicar ms
tiempo en las explicaciones, adaptaciones de los exmenes, de los materiales y en el uso de
los recursos tecnolgicos que el docente ponga a disposicin del alumno (documentos
digitalizados, grabaciones de voz, etc.), puede suponer al profesor dificultades a la hora de
trasmitirle su conocimiento, pudiendo afectar a su actitud hacia la integracin (Agudo, 2006;
Travers y Cooper, 1997).
Por tanto y como se comprueba en este estudio, es evidente la necesidad de seguir
trabajando hacia la inclusin de estudiantes con discapacidad en los centros educativos,
primero, porque existe evidencia de un cambio actitudinal ms favorable hacia este colectivo
y segundo, por los beneficios que reporta a los estudiantes con discapacidad el poder
integrarse con normalidad con el resto compaeros de su edad.
978-84-695-8363-0
1019
Referencias
Agudo, M. (2006, Mayo). Burnout y engagement en profesores de Primaria y Secundaria.
Comunicacin presentada en las Jornadas de fomento de la investigacin, Universitat
Jaume I, Castelln.
Gargallo, B., Surez, J.M., Morant, F., Marin, J.M., Martinez, M. y Diaz, I. (2003). La
integracin de las TIC en los centros escolares. Un modelo multivariado para el
diagnstico y la toma de decisiones. Madrid: MEC-CIDE.
Gmez Puerta, J.M. y Cardona Molt, M.C. (2010). Percepciones y actitudes de los padres
acerca de la discriminacin de sus hijos por razn de discapacidad intelectual.
Educacin y Diversidad, 4, 73-88.
Dengra, R., Durn, R. y Verdugo, M.A. (1991). Estudio de las variables que afectan a las
actitudes de los maestros hacia la integracin escolar de nios con necesidades
especiales. Anuario Espaol e Iberoamericano de Investigacin en Educacin
Especial. Madrid: CEPE.
Luque, D.J. y Rodrguez, G. (2008). Alumnado Universitario con Discapacidad: Elementos
para la reflexin psicopedaggica. Revista Espaola de Orientacin y
Psicopedagoga, 19, 270-281.
Salanova, M., Peir, J.M. y Schaufeli, W.B. (2002). Self efficacy Specificity and Burnout
among Information Technology Workers: An extension of the Job Demands Control
Model. European Joumal on Work and Organizational Psychologv, 11, 1-25.
Suri, R (2011). Anlisis comparativo sobre las actitudes de los estudiantes hacia sus
compaeros con discapacidad. Electronic Journal of Research in Educational
Psychology, 9, 197-216.
Travers, C.T. y Cooper, C.L. (1997). El estrs de los profesores. La presin en la actividad
docente. Barcelona: Paids.
978-84-695-8363-0
1020
Resumen
Esta comunicacin ejemplifica la participacin de profesores, padres y alumnos en el
desarrollo de un modelo de apoyo colaborativo para crear y establecer redes de
comunicacin y participacin entre los distintos sectores de los centros educativos.
Presentamos parte de una investigacin del Plan Nacional de I+D+i titulado: Escuelas que
caminan hacia la Inclusin Educativa: trabajar con la comunidad local, la voz del alumnado
y el apoyo educativo para promover el cambio (IP Carmen Gallego Vega) actualmente en
desarrollo, centrada en la creacin de estructuras participativas (Grupos de Apoyo MutuoGAM) en los centros educativos con la finalidad de capacitar a los participantes en el sentido
y uso de herramientas y estrategias para desarrollar un modelo de apoyo inclusivo. De los
distintos centros participantes en el proyecto de investigacin, analizamos aqu dos centros
representativos de las distintas etapas educativa (Educacin Infantil-Primaria y Secundaria)
como ejemplos de la adaptacin del modelo de apoyo a distintos contextos y desarrollado por
distintos colectivos educativos (Daniels y Cole, 2010; Bedward y Daniels, 2005; Gallego,
2011). Utilizando una metodologa cualitativa-participativa que pretende generar procesos
emancipatorios, exponemos los primeros resultados sobre el papel de profesores, padres y
alumnos y de cmo se puede llevar a cabo la construccin de una nueva visin del apoyo. En
esta comunicacin analizaremos y discutiremos el proceso metodolgico seguido, los
beneficios de este modo de concebir y desarrollar el apoyo, as como las dificultades que el
mismo plantea.
Descriptores: Educacin inclusiva, Apoyo inclusivo, Colaboracin, Innovacin.
Abstract
This paper illustrates the participation of teachers, parents and students in the development of
a collaborative support model to create and establish networks of comunication and
participation among different sectors of schools. We present part of an ongoing investigation
of the National I+D+ i Plan entitled "Schools walking towards Inclusive Education: working
with the local community, students voices and educational support to promote change" (PI
Gallego Carmen Vega), focusing on the creation of participatory structures (Mutual Support
Teams-GAM) in schools in order to train participants in the meaning and use of strategies to
develop an inclusive support model. From the different schools that take part in the research,
in this paper we analyze two centers that represent various educational stages (Early
Childhood Education-Primary and Secondary) as examples of the support model adaptation
to different contexts developed by different educational groups (Daniels and Cole, 2010;
Bedward and Daniels 2005; Gallego, 2011). Using a qualitative-participatory methodology
that aims to generate emancipatory processes, we present the first results on the role of
978-84-695-8363-0
1021
teachers, parents and students and how they can carry out the construction of a new support
vision. In this paper we analyze and discuss the methodological process followed, the benefits
of develop support in this way, as well as the difficulties it poses.
Keywords: Inclusive education,Iinclusive support, Collaboration, Innovation.
Introduccin
El compromiso de la investigacin educativa con el desarrollo de una Educacin
Inclusiva tiene como reto el crear y establecer en los centros educativos comunidades de
investigacin inclusivas (Parrilla, 2009). Esta es la orientacin que hemos asumido en nuestra
investigacin: que el diseo y proceso de desarrollo de la investigacin sea compartido y
construido inclusivamente, entre profesores, familias y alumnado para que, en ltima
instancia, transforme la realidad de los centros educativos hacia una escuela que favorezca el
mximo desarrollo de cada persona y garantice la participacin de todos y cada uno de sus
miembros. En este sentido, los retos que conlleva los procesos de inclusin requieren en
muchas ocasiones profundas transformaciones; en nuestro caso, estos cambios y
transformaciones tienen que ver con el mbito del apoyo: cambio en las creencias; sentido del
apoyo; procesos, estrategias y prcticas de un modelo de apoyo perifrico, especfico,
individual, centrado en la mayora de los centros en tipologas de alumnos a un modelo
inclusivo que asume las tareas de apoyo desde una perspectiva comunitaria (Gallego, 2011).
Para ello, nos proponemos centrar nuestro foco de atencin en los procesos de colaboracin y
participacin entre profesores, familias y alumnos que se producen en la creacin y desarrollo
de Grupos de Ayuda entre Iguales (GAM) como estrategia de aprendizaje, formacin y
mejora en el mbito del apoyo.
Los antecedentes inmediatos de este proyecto los encontramos en la creacin y
desarrollo de los Grupos de apoyo entre profesorado (GAEP) (Creese, Daniels y Norwich,
1997; Parrilla y Gallego, 2001; Gallego, 2002) que iniciaron y aportaron una visin nueva
sobre los procesos de apoyo, entendiendo que la misma no es una accin dirigida
exclusivamente a alumnos, ni tarea de especialistas, sino una tarea institucional que compete a
toda la comunidad educativa y se dirige a distintos contextos para desarrollarse por diferentes
colectivos comprometidos con la educacin inclusiva (Daniels y Cole, 2010). Este proyecto
supuso el inicio de experiencias que desarrollaron procesos colaborativos en los centros
educativos y propiciaron la creacin de estructuras y espacios para ello.
Los GAM, como se conciben en esta propuesta, forman parte tambin de un conjunto
de proyectos e iniciativas inclusivas que ponen en valor la accin conjunta de profesorado,
familias y alumnado, como seala Booth y Ainscow (2002) con el ndice de inclusin o
Las Comunidades de Aprendizaje (Flecha, Padrs y Puigdellivol, 2003). Frente a otras
propuestas, estos tienen en comn la estructura de evaluacin participativa inicial de los
contextos escolares, enfatizando el valor de la voz de los/as participantes (Susinos y Parrilla,
2008), la creacin de estructuras de accin y la transformacin de los contextos.
978-84-695-8363-0
1022
Mtodo
Sealbamos en el resumen de esta comunicacin que nuestra investigacin pretende
ser emancipatoria en el sentido de que entendemos que los participantes en el proyecto se
apropien del diseo de la investigacin y lo hagan suyo (Parrilla, 2009). Por ello, el diseo y
metodologa aplicada en el estudio, es sensible a los cambios y aportaciones que los propios
participantes en el proyecto consideren convenientes y adecuados a su contexto de desarrollo.
Por otra parte, entendemos la mejora escolar desde la participacin e implicacin de
las personas en un proyecto comn compartido, lejos de entender a los participantes como
sujetos pasivos o meros informadores. As ste se estructura en varias fases que, aunque
suponen en parte un desarrollo lineal, en la prctica se convierte en procesos circulares y
dialgicos que dotan de legitimidad el desarrollo del estudio en cada uno de los centros (ver
Figura 1). Las fases de las que consta este proyecto, recogen los momentos ms significativos
para la puesta en marcha, formacin y desarrollo del GAM, desde su entrada al centro (fase de
informacin y consenso), seguido de un seminario formativo inicial (donde se lleva a cabo la
evaluacin de necesidades sobre el apoyo y los participantes adquieren las competencias
bsicas para la puesta en marcha de los GAM), posteriormente el desarrollo de las sesiones de
apoyo por los GAM (fase en la que estamos actualmente) y por ltimo la evaluacin final del
proyecto. Durante todo el proceso, y especialmente en el desarrollo del GAM, se lleva a cabo
el seguimiento y asesoramiento a los participantes del proyecto.
Actualmente participan en el proyecto 5 centros de distintas etapas educativas
(Educacin Infantil, Educacin Primaria, Educacin Secundaria) pertenecientes a distintas
provincias andaluzas: Sevilla, Cdiz y Mlaga. La seleccin de los centros participantes
respondi a un muestreo intencional, en el que tuvimos en cuenta criterios fundamentales
como la existencia de una cierta orientacin inclusiva en el centro o que compartiera y/o
trabajara desde planteamientos colaborativos (Bartolom, 1986). Las tcnicas e instrumentos
utilizadas para la recogida de datos son la observacin participante de momentos de inclusin
y exclusin en el mbito del apoyo; grabacin en audio de las sesiones formativas; entrevistas
grupales e individuales y recogida y estudio de documentacin del centro; relatos y
reflexiones realizadas por los propios participantes, fotos y vdeos, etc. Las entrevistas se han
realizado al Equipo Directivo, a los miembros de cada grupo de apoyo mutuo y a un
demandante de cada GAM durante su desarrollo. A la finalizacin del proyecto, se llevar a
cabo un seminario de evaluacin en cada centro participante.
978-84-695-8363-0
1023
Para el anlisis del material generado en la investigacin seguimos las pautas clsicas
del anlisis de contenido, que supone la generacin inductiva de categoras y cdigos de
anlisis que permiten el anlisis intra e inter- grupos. El sistema de categoras se caracteriza
por ser mixto e inductivo, incluyendo una codificacin mltiple (descriptiva, evolutiva e
interpretativa). Para facilitar el manejo de la informacin procedente de cada fase y grupo,
utilizamos el programa informtico de anlisis de datos MQD-A.
Resultados
Como no puede ser de otra forma, los contextos escolares en los que se desarrolla la
investigacin que se presentan son singulares e idiosincrticos y se definen en relacin con la
comunidad que lo conforma, los entornos donde confluyen y las propuestas educativas que
sustentan su accin pedaggica. Presentamos en esta comunicacin dos centros educativos
dispares (por las etapas educativas que imparten; la idiosincracia que conlleva el ser un centro
pblico o concertado y la diferencia en el proceso de apropiacin del proyecto de
investigacin), que muestran las bondades de adaptacin y ajuste del proyecto a distintos
contextos educativos. Los dos casos que presentamos se cien a una estructura comn
(destacamos algunos aspectos y procesos llevados a cabo), que facilita la lectura comparativa
de los mismos.
Caso 1: un centro con historia
El colegio CDP X, es un centro concertado laico, formado por una cooperativa de
profesorado, en el que se imparte desde E. Infantil hasta E. Secundaria. Ubicado en un
edificio que fue un antiguo palacio sevillano, an hoy conserva techos, suelos y azulejos de la
poca. Aunque est ubicado en el centro de Sevilla, a l acuden alumnos tanto del centro
sevillano como de otros barrios como el Polgono Norte (barrio en desventaja social y
educativa) y de distintos pases (Italia, Marruecos, Espaa, Ecuador, China, Rusia, Francia y
este ao varias familias americanas). Esta diversidad en el alumnado hace que sea un colegio
978-84-695-8363-0
1024
de culturas compartidas ya que siempre podremos ver por los pasillos a nios de diferentes
nacionalidades aprendiendo juegos o costumbres. Esto no supone en ningn momento un
hecho conflictivo para el colegio, ya que llevan aos trabajando con alumnos de distinta
procedencia y nivel econmico. La organizacin del dentro responde a planteamientos
educativos tradicionales: los agrupamientos en las clases son generalmente gran grupo
comprendido entre 20-28 alumnos dependiendo de la etapa y curso. En el rea de atencin a la
diversidad cuentan con dos orientadoras que compaginan su tutora con tareas de orientacin
y asesoramiento; un aula de apoyo a la que asisten alumnos con diagnstico previo y otra de
apoyo y refuerzo educativo para alumnos con dificultades de aprendizaje.
Seminario Formativo Inicial: un aprendizaje compartido.
Tras el primer contacto con el centro, se desarrollaron dos seminarios formativos en
distintos momentos que conformaron la creacin y formacin de tres GAM: GAM de
profesores, GAM de padres y GAM de alumnos. En el primer seminario, participaron 14
profesores y 3 madres del centro junto con tres investigadoras del proyecto. Se realizaron en
dos sesiones de dos horas cada una y en das consecutivos. En estas sesiones, se reflexion
sobre la escuela inclusiva, los supuestos tericos de los GAM; estrategias de comunicacin y
modelos de anlisis de problemas que a travs de actividades, como la descripcin de ventajas
e inconvenientes del GAM, se foment la reflexin sobre el objetivo de llevar a cabo este
proyecto en el colegio. Al analizar estas ideas, el colectivo de profesores y madres sealaron
una serie de ventajas e inconvenientes. Esta actividad fue de utilidad para que se reafirmaran
los objetivos y supuestos que dan sentido al proyecto, y se estuviera alerta frente a las
debilidades que giraron en torno a lo que supone la credibilidad que pueda tener el modelo de
apoyo en su centro y los miedos de no poder afrontar los problemas que planteen en el
GAM. La formacin inicial fue de utilidad para activar las ideas sobre qu era el GAM, para
qu podra servir, quines seran los componentes del GAM, cundo y dnde se llevara a
cabo. Con ellas, se formaron los GAM de profesores y padres/madres. El GAM de profesores,
lo formaran cuatro maestras de infantil y primaria, mientras que el otro, lo formaron tres
madres. Se estableci un horario semanal para las reuniones, as como un espacio adecuado
que facilitara la comunicacin en las sesiones de apoyo.
En un segundo seminario, realizado dos meses ms tarde, participaron solo los
estudiantes de 4 de la ESO (17 alumnos). Se realiz en dos sesiones consecutivas de dos
horas cada una. Los profesores del centro sealaron en el anlisis de necesidades la
oportunidad de crear un GAM entre alumnos con la finalidad de que fuera una estructura de
apoyo y ayuda para dar el paso en su prxima transicin educativa y formarlos en
competencias bsicas para el desempeo profesional como la autonoma, responsabilidad,
comunicacin, habilidades interpersonales y trabajo en equipo. El seminario comenz
realizando la actividad de foto-lenguaje, en la que a travs de preguntas como: Cmo os
sents cuando tenis un problema? y, Cmo os sents con el prximo cambio (transicin)?
Ellos eligieron imgenes con las que se identificaban para responder a la pregunta. Los
alumnos mostraron su miedo, angustia a lo desconocido, falta de apoyo y la necesidad de
pedir ayuda para resolver problemas y afrontar la cercana transicin educativa. Se
desarrollaron otras actividades como un auto-balance sobre las competencias que poseen y
aquellas que pueden mejorar; el diseo de un itinerario personal; simulaciones de apoyo;
simulaciones de comunicacin; etc. La observacin de estas actividades, junto con otras,
evidenciaron las dificultades que los alumnos tenan para identificar sus competencias,
elaborar su proyecto vital y profesional; habilidades sociales y comunicativas, etc.
978-84-695-8363-0
1025
978-84-695-8363-0
1026
diferenciados para maestras y madres. Para el caso del GAM entre docentes hay que sealar
que participaron en este proceso todas las maestras del centro, as como una estudiante en
prcticas. En el caso de las familias se configur un equipo inicial de tres madres, al que ms
tarde se sum una ms. Se llevaron a cabo cuatro sesiones formativas por cada colectivo, en la
que los investigadores participantes realizaban funciones de amigo crtico (Booth y Ainscow,
2002). Estas sesiones (duracin variable entre hora y hora y media segn necesidades) giraron
en torno a: configuracin del GAM como estructura de apoyo; los procesos de publicidad, la
resolucin colaborativa de problemas; una simulacin de una sesin de apoyo GAM y
habilidades comunicativas. Las sesiones de apoyo formativo capacitaron a los grupos
formados en las habilidades y destrezas necesarias conforme a las caractersticas de los
grupos. As, la formacin hacia docentes se focaliz ms hacia la utilidad de los GAM como
instrumento de desarrollo profesional, mientras que en el caso de las familias se orient ms a
la comprensin del ciclo de resolucin colaborativa de problemas y aspectos comunicativos.
Dichas sesiones tambin fueron de especial utilidad para que, a travs de dinmicas, se
diseara la estructura interna del GAM y su protocolo de funcionamiento. Las docentes
constituyeron un GAM de tres personas, conformado por una maestra ms experta, otra ms
novel y una estudiante en prcticas a fin de contar entre sus miembros con una visin diversa,
asociada a trayectorias vitales y profesional. Sus reuniones las concretaran en el horario de
comedor (de 14,00 a 14,30) de la escuela con objeto de que todo el personal educativo pudiera
tener acceso al recurso.
Los GAM en accin
En un entorno tan reducido de trabajo, compuesto por las maestras y el conjunto de
personal de apoyo, la publicidad se realiz mediante una estrategia informal, el boca a boca
y un cartel en la puerta de los aseos, como espacio de confluencia de todo el personal. Por su
parte, el GAM de familias qued constituido por cuatro madres de la escuela, con hijos e hijas
en aulas de 1-2 y 2-3 aos, con el fin de dar continuidad al GAM cuando el prximo curso dos
de ellas abandonen el centro por promocin educativa de los/as pequeos/as. La
configuracin de este GAM tambin ha sido peculiar conforme a las necesidades de las
madres, en cuanto que han diseado un GAM rotatorio, en el que semanalmente estn
presente tres de las cuatro madres y as liberar a una de ellas para que pueda atender a sus
asuntos personales, familiares y profesionales. El GAM de madres se encuentra diseando su
publicidad para empezar a funcionar. En el caso 2 y el GAM de las maestras, el primer caso
se present durante la ltima sesin de apoyo formativo, lo que les llev a convocar una
reunin urgente dado que la maestra implicada as lo demand. Implicaba la resolucin
colaborativa de un problema que se haba planteado el da anterior. Se trat de un conflicto
con una familia. Este primer caso fue de utilidad no solo para poder dar respuesta a una
situacin compleja, sino que adems afloraran problemas organizativos existentes en la
escuela y que se irn presentando al GAM en sucesivas intervenciones. El segundo caso
abordado est asociado al desarrollo profesional docente: una maestra plantea al GAM que
tiene la necesidad de ser evaluada cualitativamente por sus compaeras, as como quiere
proponer la evaluacin de los proyectos de aula como frmula para poder repensar su prctica
(y la del equipo). En el GAM este caso fue de utilidad para animar un diseo evaluativo que
sera presentado por la demandante al equipo educativo.
Discusin
Son numerosas las conclusiones que podemos extraer del anlisis de los resultados,
pero destacamos aquellas que se han puesto en evidencia en estos dos casos presentados:
978-84-695-8363-0
1027
978-84-695-8363-0
1028
978-84-695-8363-0
1029
Resumen
El trabajo que presentamos trata de analizar los efectos que se producen en una cohorte de
estudiantes de la ESO que se asignaron a grupos Ordinarios o de Ampliacin en Lengua,
Matemticas e Ingls desde su incorporacin al centro origen segn las puntuaciones
obtenidas en la prueba Batera de contenidos escolares de Primaria. (BACEP 3) de Prez, M.
et al. (2005) y continuando en grupos heterogneos en el resto de las asignaturas. Los
agrupamientos iniciales no tenan carcter permanente. A cada alumno se le poda cambiar
de grupo en funcin de su rendimiento. Se analizar el nivel de progreso o retroceso de los
estudiantes tanto en la Batera de contenidos escolares de Secundaria (BACES) de los
mismos autores, as como en el rendimiento en las distintas asignaturas cursadas a lo largo
de la ESO. Tambin se ha buscado la triangulacin de fuentes y metodolgica con el objetivo
de pulsar y conocer la valoracin que hacen los estudiantes, los padres y los profesores sobre
las ventajas e inconvenientes de este tipo de agrupamiento.
Descriptores: Rendimiento acadmico, atencin a la diversidad, enseanza secundaria
obligatoria.
Abstract
The purpose of this paper is to analyse the effects in a cohort of students of Education
Secundaria Obligatoria ESO (Comprehensive Secondary Education) that were assigned to
different groups at their entrance in the Secondary School (12 years old) taking into account
the results in Batera de Contenidos Escolares de Primaria - BACEP 3 (Primary Curriculum
Assessment Battery), de Prez, M. et al. (2005). Thus they were directed to Ordinary groups
or to Extended (Ampliacin) groups in several subjects: Spanish Language, Mathematics, and
English Language, attending the rest of subjects in the reference (heterogeneous) group.
These initial ensembles were not on permanent basis as pupils could change of group taking
into account their academic results. We will check their progress in Batera de Contenidos
Escolares de Secundaria BACES 1 (Secondary Curriculum Assessment Battery) by the same
authors, along with their results in all the Curriculum subjects in ESO. We also made
triangulation both in sources and in methodology as a way to check and to know how
students, parents and teachers, value the advantages and inconvenient of this kind of
grouping.
41
Han colaborado en la redaccin del trabajo Fernndez, A., Parra, M J. y Prez, M. del IES La Granja
(Heras).
978-84-695-8363-0
1030
Introduccin
El Instituto de Enseanza Secundaria La Granja de Heras (Cantabria) es un centro con
una larga trayectoria en el tratamiento a la diversidad, habiendo sido pionero en la aplicacin
de medidas de este tipo y redefiniendo dichas medidas en funcin de las necesidades y
caractersticas de su alumnado.
El propsito del presente trabajo es analizar el grado de eficacia de las medidas
adoptadas dentro del Plan de Atencin a la Diversidad del centro a travs del estudio
longitudinal de una cohorte de alumnos en la etapa de la Educacin Secundaria. Pretendemos
comprobar si el conjunto del alumnado mantiene o mejora su situacin acadmica al final de
la etapa.
La necesidad de realizar este estudio ha surgido de dos tipos de motivos relacionados:
A nivel de centro: comprobar si las medidas adoptadas y llevadas a cabo cumplen los
objetivos para las que fueron diseadas.
A nivel general: demostrar que se puede superar el tpico de que la Secundaria es una
etapa de mediocridad en la que, por lo general, los alumnos con buen rendimiento anterior
pasan a asimilarse a los de un rendimiento medio-bajo.
978-84-695-8363-0
1031
Instrumentos
Pruebas de diagnsticas
El diagnstico psicopedaggico de los alumnos se realiz mediante el BaCeP-3 (Batera
de Contenidos Escolares de Primaria)42 que trata de valorar tanto contenidos conceptuales
como procedimentales en el alumnado de Primaria en los siguientes mbitos: Conocimiento
del Medio, Lengua, Matemticas, Madurez y BACEP global: como sumatorio de todas las
pruebas contempladas. Los datos se recogieron en el comienzo de 1 de la ESO (curso 200809) mediante la versin web y los baremos para 6 de Primaria. Posteriormente, al final del
curso 2009-10 (2 de la ESO), se recogi ms informacin mediante la Prueba Diagnstica de
Secundaria (PDS)43 que se corresponde con el BACES-1. Entre ambas pruebas hay
correspondencia entre la puntuacin Global, la de Lengua y la de Matemticas. Por ello
utilizaremos estos elementos como trminos bsicos de comparacin.
Rendimiento escolar: calificaciones
Tambin se recogi informacin sobre el rendimiento acadmico de los estudiantes
expresado en las calificaciones de cada una de las asignaturas cursadas por los estudiantes.
Clima del grupo: entrevistas a padres y estudiantes
Para conocer la valoracin que los estudiantes realizan sobre el tipo de agrupamiento
realizado se han llevado a cabo entrevistas semi-estructuradas en las que han participado un
total de 18 alumnos agrupados en tres grupos de cuatro y uno de seis (7 han estado en el
grupo de Ampliacin, 9 en grupo Ordinario y 2 en grupos de Adaptaciones-Diversificacin) y
un con un grupo de padres.
Objetivo e hiptesis
El objetivo de la experiencia era lograr que en cada uno de los agrupamientos realizados
se consiga el mximo rendimiento en funcin de las capacidades de sus integrantes y en un
buen clima de convivencia.
Para la comprobacin del mismo se plantean las siguientes hiptesis:
42
Prez Avellaneda, M. et al. (2005). Batera de contenidos escolares de Primaria. BACEP 1,2 y 3. Manual
Tcnico. Madrid: CEPE, p. 20-25. http://www.ined.es/bacep/UsuarioIniciaEvaluacion.php (consultada el
10/04/2013).
43
http://www.ined.es/pds/UsuarioIniciaEvaluacion.php (consultada el 10/04/2013).
978-84-695-8363-0
1032
Procedimiento
El procedimiento de estudio adopta el esquema de los diseos post hoc,
complementado con la utilizacin de mtodos cualitativos de recogida de informacin de las
distintas fuentes (padres y alumnado).
Resultados
Evolucin de la cohorte de alumnos desde el 2008-09 (1) hasta el 2011-12 (4)
Si consideramos la totalidad de los 66 estudiantes iniciales de la cohorte, podemos decir
que se va produciendo un ligero descenso del nmero de los que promocionan al curso
siguiente desde el 87,9% (1) hasta el 81,8% (4). Aunque los datos no son estrictamente
comparables, en Cantabria las tasas aproximadas de promocin media en cada curso
(secuencia desde 2007/08 a 2009/10) son las siguientes: en 1 es del 87%, en 2 del 86%, en
3 del 82% y, finalmente, en 4 del 84%. Para hacernos una idea ajustada de la situacin,
conviene tener en cuenta que las estadsticas publicadas ms prximas a nuestros estudiantes
son las de 2009/10 y en ellas aparece una tasa nacional de estudiantes que terminan la ESO
del 74,01% y una tasa en Cantabria (la ms elevada de Espaa) del 87,7%. Podemos decir,
aunque todava algunos estudiantes no han terminado la ESO, que la cohorte estudiada
presenta una tasa bastante superior (94% si sumamos los que promocionan y los que repiten
del grupo de los 66 iniciales).
Movilidad de los estudiantes entre agrupamientos desde el 2009-10 (2) hasta el 2011-12
(4)
Hemos configurado tres tipos de estudiantes en funcin de su inclusin en los diversos
agrupamientos de cada curso a partir de 2 que es donde se inici el grupo de Ampliacin.
Bloque B: los que han permanecido en la mayor parte de los cursos en el Ordinario con 42
sujetos (63,6%).
Y, finalmente, el bloque C: los que han permanecido regularmente en el grupo de
Ampliacin: 18 estudiantes que significan un 26,3% sobre el total. En el momento de
comienzo de la experiencia (2009-10) haba 22 estudiantes en este agrupamiento
(33,33%).
978-84-695-8363-0
1033
Figura 2.- Diferencia de medias entre PDS y BACEP segn pertenencia al grupo de ampliacin y al
ordinario (datos pareados)
978-84-695-8363-0
1034
Comparacin intergrupos:
En las pruebas del primer curso (BACEP) podemos comprobar que el grupo de
Ampliacin, como caba esperar, obtiene puntuaciones medias superiores al grupo Ordinario
en todas las variables. Todas ellas resultaron estadsticamente significativas, pudindose
apreciar unas diferencias que se sitan entre 30 y 35 puntos percentiles. Ver figura 3.
Se observa, por tanto, el mantenimiento de unos resultados altos en la Prueba
Diagnstica (PDS) en el grupo de Ampliacin y se produce una mejora significativa en los
estudiantes del grupo Ordinario.
Figura 3.- Diferencia de percentiles medios entre el grupo de Ampliacin y el Ordinario (muestras
independientes). Todas estadsticamente significativas (p<.01)
Podemos decir, por tanto, que han mejorado en mayor medida los del grupo Ordinario
que los de Ampliacin. Si bien es cierto que, dados los niveles iniciales elevados del grupo de
Ampliacin, ste tena un margen de mejora de menor recorrido.
Calificaciones obtenidas en las asignaturas cursadas desde 2009 a 2012
Si consideramos a los dos grupos como muestras independientes y comparamos las
medias obtenidas en sus calificaciones, observamos que las del grupo de Ampliacin son
superiores a las del grupo Ordinario en todos los casos y con un paralelismo claro.
Las diferencias oscilan entre un mnimo de 1,252 (Educacin Fsica 2011) y un
mximo de 3,385 (Ingls 2009) puntos en la escala de calificacin. Si consideramos la nota
Global de cada una de las reas curriculares, la mayor diferencia aparece en Ingls (2,688
puntos a favor del grupo de Ampliacin), seguida de Matemticas y Lengua (2,18 y 2,17
respectivamente). Recordemos que en estas asignaturas es donde se han realizado los
agrupamientos descritos. En Sociales y Naturales (en torno a 2,12) y, finalmente, en
Educacin Fsica es donde se puede apreciar la menor diferencia entre ambos grupos.
978-84-695-8363-0
1035
Figura 4.-Diferencias de calificaciones medias en las asignaturas para cada agrupamiento entre el
ao inicial y final. Datos pareados
978-84-695-8363-0
1036
978-84-695-8363-0
1037
Yo creo que he ido mejorando, pero ha sido por el esfuerzo, una persona que trabaja
constantemente puede ver los resultados.
Padres:
Mi hijo ha superado dificultades iniciales de aprendizaje y ha madurado adquiriendo
confianza en sus posibilidades. Mi hijo siempre ha sido muy creativo pero tambin
muy disperso y cuando empez en el instituto tena dificultades para organizarse. Su
evolucin ha sido muy positiva, ha mantenido lo bueno de su personalidad
desarrollando las capacidades que necesitaba. Mi hija siempre ha estado motivada
para los estudios y han sacado buenas notas, esto ha seguido as en el instituto y nunca
se ha sentido un bicho raro.
Influencia sobre relaciones sociales
Estudiantes:
Yo nunca he notado nada distinto. Si ha habido algn problema ha sido porque se
llevaban mal, no porque estuvieran en un grupo u otro.
Al principio en 2, haba bromas hacia los de ampliacin, que si eran los listos y as,
pero no pasaron de bromas sin importancia que se acabaron pronto.
Somos todos iguales ningn problema en adaptaciones. Con ampliacin algunos
pareca que iban como sobrados pero nada exagerado. Las relaciones con ellos
siempre fueron normales.
Padres:
Los chicos lo han vivido con normalidad y naturalidad, no se han sentido
discriminados ni sealados. Los grupos de amigos no han estado marcados por los
grupos del centro, tienen amigos en todos los agrupamientos y permanecen con ellos.
Comentando con amigos y familiares de otros centros, incluso en otras comunidades
autnomas, se asombran puesto que, lo generalizado es que no se debe ser buen
alumno, sacar buenas notas y esforzarse no est bien visto y esto provoca falta de
inters y motivacin.
Conclusiones
En conjunto, se ha constatado que no solamente se ha detenido la expansin de la
cultura de la mediocridad a la que aludamos al comienzo y que parece se estaba instalando
de manera galopante entre el alumnado hacia el ao 2004, sino que se ha revertido la
tendencia, como muestra que en esta cohorte en la prctica desapareci el grupo de
Adaptaciones.
Se ha cumplido tambin uno de los objetivos iniciales, la prestacin de atencin al
grupo de alumnado con buenas o altas capacidades, aspecto muy bien valorado tanto por las
familias como por los propios alumnos. Los datos estadsticos de resultados ponen de
manifiesto que este tipo de alumnado, no solamente no ha bajado su rendimiento, sino que lo
ha mantenido y mejorado incluso.
978-84-695-8363-0
1038
978-84-695-8363-0
1039
Resumen
Un objeto de aprendizaje (OA) puede ser definido como una entidad informativa digital que
tiene por finalidad la construccin de conocimientos y habilidades en las personas que las
emplean. Bajo esta premisa, hemos realizado un proyecto de innovacin docente que ha
diseado, aplicado y evaluado un OA orientado al aprendizaje por parte de los estudiantes
del procedimiento para citar y referenciar documentos siguiendo la normativa APA
(American Psychological Association). En este trabajo presentamos la valoracin realizada
por estudiantes de primer curso de la rama de conocimiento de Ciencias Sociales, sobre la
claridad, contenido, organizacin, capacidad para facilitar aprendizajes y utilidad de dicho
OA. Los resultados nos permiten afirmar que la incorporacin de este tipo de recursos, la
simplicidad y facilidad de uso a travs de la red, junto a la perdurabilidad de los mismos los
hacen especialmente tiles para el desarrollo de competencias y aprendizajes
autorregulados.
Descriptores: Objetos de aprendizaje, TIC, innovacin docente, aprendizaje autorregulado.
Abstract
A learning object (LO) can be defined as a digital informational entity whose purpose is to
build knowledge and skills in people who use them. Under this premise, we conducted a
teaching innovation project has designed, implemented and evaluated a learning-oriented OA
by students of the procedure for citing and referencing documents following the APA
normative (American Psychological Association). We present the assessment made by first
year students of the branch of knowledge of Social Sciences, on clarity, content, organization,
ability to facilitate learning and usefulness of the OA. The results allow us to assert that the
incorporation of this type of resources, simplicity and ease of use through the network, along
with the durability of them make them particularly useful for the development of skills and
self-regulated learning.
Keywords: Learning objects, ICT, educational innovation, self-regulated learning.
978-84-695-8363-0
1040
Introduccin
En la actualidad son muchos y muy diferentes los recursos y herramientas tecnolgicas
que el docente tiene a su disposicin, pero emplearlas de manera que faciliten el aprendizaje a
los estudiantes en una asignatura es ms complejo. Obviamente, las tecnologas de la
informacin y la comunicacin (TIC) per s no representan ninguna garanta al servicio de la
enseanza y el aprendizaje, sino que las posibilidades didcticas que podemos encontrar en
ellas van a depender de aquello que demandemos al alumno y las actividades que tengan que
realizar con ellas para resolverlo (Area, 2007; Cabero & Lpez, 2009). Por ello, es bsico que
el docente est capacitado, no slo para aplicar las tecnologas a la educacin, sino tambin
para disear nuevos escenarios donde los alumnos puedan aprender a moverse e intervenir
con las TIC.
Al mismo tiempo, la implantacin de los grados universitarios ha supuesto la
obligatoriedad de la elaboracin y defensa del Trabajo Fin de Grado (TFG) y eventualmente,
un Trabajo Fin de Mster (TFM) para aquellos que tambin cursen un postgrado, generando
la necesidad de adquirir conocimientos y habilidades competenciales bsicas que les ayuden a
iniciarse en el proceso de investigacin.
Conscientes de esta situacin, desde nuestro grupo de trabajo del Departamento de
Mtodos de Investigacin y Diagnstico en Educacin, a lo largo de varios aos acadmicos
hemos participado en las diferentes convocatorias para promover experiencias de innovacin
educativa promovidas por la Universidad de Murcia. Consideramos que es fundamental poner
a disposicin del estudiante nuevos recursos que le faciliten el aprendizaje, por ello en el
curso 2011/2012 iniciamos un proyecto de innovacin docente centrado en el diseo y
elaboracin de Objetos de Aprendizaje de iniciacin a la investigacin. Nuestro objetivo es
disear un material de distribucin en red en el que apoyarnos para facilitar a los estudiantes
la adquisicin de la competencia investigadora y la realizacin de trabajos acadmicos en sus
asignaturas, as como para la realizacin del Trabajo Fin de Grado y Trabajo Fin de Mster
(Snchez-Martn, Mirete, Maquiln, Izquierdo y Hernndez-Pina, 2012).
El concepto de Objeto de Aprendizaje no es una innovacin reciente. El origen de este
trmino se le atribuye a Wayne Hodgins en 1992 (Universidad Politcnica de Valencia, n.d.)
quien observando a su hijo jugar con la piezas de un LEGO se dio cuenta de que exista la
posibilidad de conceptualizar el aprendizaje de igual forma, es decir, asoci los bloques de
LEGO con los bloques de aprendizaje normalizado con la finalidad de reutilizarlos en
procesos educativos posteriores. Desde esta fecha hasta la actualidad, han sido muchas las
definiciones planteadas por distintos autores. La ms extendida define un Objeto de
Aprendizaje como un recurso didctico digital reutilizable en red que debe ajustarse a unos
parmetros tales como su formato, contenido, estructura, etc., si bien la realidad de nuestras
aulas nos ha llevado a reelaborar tal concepto y adaptarlo a nuestras necesidades. As,
podemos hablar de materiales didcticos en formato digital con un claro propsito
pedaggico, los cuales han sido elaborados prestando especial atencin a uno de los principios
que fundamentan el concepto de objeto de aprendizaje: su posible reutilizacin en diferentes
contextos educativos, ya que nuestro inters en los objetos de aprendizaje no se limita a la
mera produccin de contenidos digitales, sino que buscamos en todo momento la produccin
de materiales que puedan ser reutilizados libremente por otros docentes y discentes como
herramienta de enseanza y aprendizaje (Prendes, Martnez y Gutirrez, 2008).
978-84-695-8363-0
1041
978-84-695-8363-0
1042
978-84-695-8363-0
1043
978-84-695-8363-0
1044
Resultados
A continuacin se presentan los resultados obtenidos para cada uno de los objetivos
especficos. En el primero de ellos se describe la valoracin que hacen los estudiantes sobre la
dificultad que les supone citar siguiendo las normas APA. Como se observa en la Tabla 1, el
56.6% de los participantes considera que citar es difcil o muy difcil. El 35.8% considera que
tiene un nivel de dificultad medio, pero lo que llaman la atencin es que tan slo el 7.6%
considera que citar con las normas APA es fcil o muy fcil. Con estos resultados se justifica
ampliamente el diseo, aplicacin y evaluacin de cualquier recurso, como pueden ser los
objetos de aprendizaje (OA), empleados para facilitar a los estudiantes universitarios en el
proceso de adquisicin de competencias bsicas, como la de iniciacin a la investigacin.
Tabla 1
Valoracin de la dificultad del manejo de las normas APA
Muy difcil
F / % 14 / 26.4
Difcil
Regular Fcil Muy fcil
16 / 30.2 19 / 35.8 3 / 5.7
1 / 1.9
Muy claro
10 / 18.8
Ninguna
0/0
Muchas
6 / 11.3
La ltima de las opiniones de los participantes se relaciona con la dificultad para citar
tras haber utilizado el OA. Como se observa en la Tabla 4, slo el 13.2% considera que citar
documentos siguiendo las normas APA, tras haber manejado el OA, es difcil o muy difcil,
frente al 56.6% que lo consideraba as antes de emplear el OA, suponiendo una reduccin
muy sustancial en el grado de dificultad. El 43.4% considera que la dificultad es media, el
37.7% considera que es fcil y el 5.7% considera que es muy fcil. Estos porcentajes
contrastan con el 7.6% que consideraba que dicha actividad era fcil o muy fcil antes de
conocer y utilizar el OA. Se ha producido un incremento del 35.8% de estudiantes que han
dejado de considerar el proceso de citar como una actividad altamente compleja y dificultosa.
978-84-695-8363-0
1045
Tabla 4
Valoracin de la dificultad al citar tras manejar el OA
F/%
Poco Suficiente
2 / 3.8 9 / 17.0
Bastante Mucho
30 / 56.6 12 / 22.6
La utilidad del OA para el aprendizaje de las normas APA se analiza en dos sentidos,
el primero para las asignaturas de iniciacin a la investigacin (Tabla 7) y el segundo como
til para cualquier asignatura del grado que estn cursando (Tabla 8). Destacamos que la
totalidad de los estudiantes lo consideran til, siendo muy similares los porcentajes. El 77.3%
de los estudiantes lo consideran bastante til o muy til para las asignaturas de investigacin
(Tabla 7), y el 73.6% (Tabla 8) para el resto de asignaturas del grado.
Tabla 7
Valoracin la utilidad del OA para las asignaturas de investigacin
F/%
Tabla 8
Valoracin la utilidad del OA para las asignaturas del grado
F/%
978-84-695-8363-0
1046
Destacamos que el tpico til para todas las asignaturas del grado slo correlaciona
con til para las asignaturas de investigacin y con el objeto de aprendizaje cumple con
sus expectativas.
Tabla 9
Correlacin de Spearman entre los tpicos analizados de los OA
Claro
Contenidos
Organiz.
Cumple ex.
Dific. A.
Dific. D.
til invest.
til asig.
Claro
Cotenid.
Organiz.
.54
.47
.55
.39
.52
.51
.46
.33
.34
.45
.44
Cumple
exp.
Dificultad
A.
.34
.47
.30
.29
Dificultad
D.
til
investig.
til
asig.
.50
.57
Conclusiones y discusin
La elaboracin de los objetos de aprendizaje sobre la citacin y referencia siguiendo
las normas APA ha resultado una tarea costosa ya que no se ha diseado desde la perspectiva
del profesorado como docentes, sino teniendo en cuenta aquellos aspectos que
tradicionalmente han supuesto mayor problema para los estudiantes, sobre todo en aquellas
asignaturas en las que estos contenidos forman parte de las competencias especficas.
Resaltamos que nueve de cada diez estudiantes entrevistados considera que citar
documentos siguiendo la normativa APA tiene dificultad, y de ellos, seis de cada diez lo
considera como un aprendizaje difcil o muy difcil. Estos resultados se constatan con la
opinin generalizada del profesorado que afirma que los estudiantes no llegan a adquirir esta
competencia o les cuesta mucho esfuerzo.
Un aspecto bsico y prioritario del diseo de la herramienta ha sido su claridad,
confirmando que la totalidad de los estudiantes que la han empleado consideran que se
presenta de un modo claro y accesible, lo cual facilita su utilizacin.
En la presentacin del OA se hace especial hincapi en la finalidad y utilidad de dicha
herramienta, por ello se crean una serie de expectativas en los destinatarios. Tras la valoracin
de las mismas concluimos que mayoritariamente se han cumplido, ya que dos de cada tres
estudiantes se pronuncian positivamente en este sentido.
Como hemos anticipado, los estudiantes consideran que la actividad de citar
documentos es dificultosa y compleja. Tras haber utilizado el OA se ha reducido
notablemente el porcentaje de estudiantes que as la valora, pasando a considerarla una
actividad de complejidad media o incluso fcil. El aspecto que mejor evalan los estudiantes
sobre el recurso es su organizacin, estructura y, sobre todo, la utilidad, ya que todos lo
valoran positivamente y cuatro de cada cinco apuntan que el mismo facilita mucho el
aprendizaje de dichas normas, siendo bastante til o muy til para las asignaturas con
contenidos de metodologa de investigacin, y para el resto de asignaturas del grado.
Con esta perspectiva, consideramos que los procedimientos de innovacin y mejora
del profesorado y el desarrollo de recursos para el aprendizaje autorregulado de los
978-84-695-8363-0
1047
978-84-695-8363-0
1048
Resumen
La problemtica del fracaso escolar constituye una de las principales preocupaciones de
muchos pases occidentales. Resulta prioritario para las polticas educativas el abordar esta
problemtica intentando reducir el nmero de jvenes que abandona el sistema educativo sin
unas competencias acadmicas y profesionales mnimas. Espaa, segn los datos de la
Comisin Europea, tiene un ndice de abandono escolar del 26.5% (2011), el segundo ms
alto de toda la UE. En este trabajo hemos aplicado un cuestionario a 281 estudiantes de 3 y
4 de ESO, con el que identificar sus enfoques de aprendizaje y, segn su opinin, los factores
relacionados con el fracaso escolar y que medidas habra que adoptar para minimizarlo. Los
resultados presentan la relacin existente entre el rendimiento acadmico y los factores
determinantes del fracaso escolar desde la perspectiva de los estudiantes, se identifican los
aspectos que lo fomentan y algunas propuestas para reducirlo.
Descriptores: Fracaso escolar, enfoques de aprendizaje, rendimiento acadmico, educacin
secundaria (E.S.O.).
Abstract
The problem of school failure is a major concern in many Western countries. A priority for
education policies tackling this problem trying to reduce the number of young people leaving
the education system without a minimum academic and professional competences. According
to data from the European Commission, Spain has a dropout rate of 26.5% (2011), the second
highest in the EU. In this work we applied a questionnaire to 281 students in 3rd and 4th year
of Secondary School, with which to identify their approaches to learning and, in his opinion,
the factors associated with school failure and that measures should be taken to minimize it.
The results show the relationship between academic performance and the determinants of
school failure from the perspective of students, identify aspects that foster it and some
proposals to reduce it.
Keywords: school failure, approaches to learning, academic performance, secondary school.
Introduccin
La orientacin de las investigaciones acerca del aprendizaje de los alumnos sufri un
cambio a partir de la dcada de los 70. Con anterioridad, el rendimiento acadmico se
978-84-695-8363-0
1049
978-84-695-8363-0
1050
que se consideran necesarios para manejarse de forma satisfactoria en la vida social y laboral
o proseguir sus estudios.
La problemtica del fracaso escolar se ha ido incrementando considerablemente en
muchos pases, por lo que existe una preocupacin generalizada de padres, profesores,
administracin educativa y, en algunas ocasiones, de los estudiantes que lo sufren. Si bien, es
cierto que la erradicacin total de este problema puede constituir una utopa, la existencia de
un fracaso escolar con tan elevado nmero de alumnos el 26.5% en el curso acadmico
2011/2012 segn datos de la Comisin Europea) es una realidad a la que hay que enfrentarse,
buscando soluciones y alternativas que permitan evitar la desescolarizacin temprana y que
fomenten a su vez un mayor vnculo con las instituciones educativas, para reducir as el ndice
de fracaso escolar. De hecho, el Proyecto de Ley Orgnica de Calidad de la Educacin (2003,
p.3) afirma que existe la necesidad de reducir las elevadas tasas de abandono de la educacin
secundaria obligatoria; de mejorar el nivel medio de los conocimientos de nuestros alumnos;
de universalizar la educacin y la atencin a la primera infancia; y en la necesaria ampliacin
de la atencin educativa a la poblacin adulta.
No obstante, en una investigacin realizada por Balzano (2002), se confirma que, con
independencia de la clase social, los padres y madres atribuyen el fracaso escolar a factores
relacionados con lo que sucede en la propia familia, factores propios del estudiante y factores
escolares. En relacin al alumnado, se deben analizar aspectos como los rasgos de
personalidad, el nivel de autoestima, las estrategias de aprendizaje que emplea, as como las
atribuciones que hacen los estudiantes acerca del xito o el fracaso escolar en relacin con
causas como la suerte, el profesorado, la falta de esfuerzo o la baja capacidad (Cerezo y
Casanova, 2004), as que algunos de estos factores son analizados en el contexto en el que se
lleva a cabo esta investigacin.
Para dar respuesta a algunas de las interrogantes planteadas, nos hemos planteado tres
objetivos especficos: 1.- Describir enfoques de aprendizaje de los estudiantes. 2.- Identificar
los factores determinantes del fracaso escolar y 3.- Analizar los factores necesarios para
incrementar el rendimiento acadmico.
Mtodo
Participantes
El nmero de participantes es de 281 estudiantes, pertenecientes a dos institutos
diferentes de la Regin de Murcia: el I.E.S. Caada de las Eras (Molina de Segura) y el I.E.S.
Santa Mara de los Baos (Fortuna). En la Tabla 1, presentamos la distribucin en funcin de
la variable sexo y curso.
Tabla 1
Distribucin de los participantes en funcin del sexo y el curso
SEXO
FRECUENCIA
PORCENTAJE
Chico
127
45.2%
Chica
154
54.8%
3 E.S.O
140
49.8%
4 E.S.O
141
50.2%
TOTAL
281
100%
Instrumento
El instrumento empleado es el Cuestionario sobre Procesos de Aprendizaje (CPA),
978-84-695-8363-0
1051
adaptado y traducido por la Dra. Hernndez-Pina (1994) del Learning Process Questionnaire
(Biggs, 1987b). Este cuestionario est compuesto por 36 tems que reproducen un modelo
jerrquico de seis subescalas, tres motivacionales y tres estratgicas, configurando finalmente,
de acuerdo con el modelo terico original, los tres enfoques de aprendizaje. A este
instrumento se le han aadido tems sobre las calificaciones en diversas asignaturas, las
circunstancias que le han llevado a la situacin de fracaso escolar, los aspectos que considera
necesarios para mejorar su propio rendimiento acadmico y las medidas que est llevando a
cabo para mejorar dicho rendimiento.
Procedimiento
Esta investigacin se ha desarrollado siguiendo un diseo tipo encuesta. Se ha visitado
cada centro, tras contactar con el director o jefe de estudios y posteriormente se han aplicado
los cuestionarios en los das y horas que nos han facilitado. El tiempo de aplicacin fue de
unos 25 minutos aproximadamente. Una vez recogidos los datos, se informatizaron y
analizaron las respuestas con el paquete estadstico SPSS versin 19.0.
Resultados
Pasamos a presentar los resultados obtenidos para cada uno de los objetivos
especficos. En el primero de ellos que describimos los enfoques de aprendizaje de los
estudiantes, como se observa en la Tabla 2, las medias ms altas son las del enfoque profundo
(36.15) y las de alto rendimiento (36.20), lo cual quiere decir que el grado de afianzamiento
de los enfoques es mayor que en el enfoque superficial. Lo interpretamos como que el
estudiante que emplea un enfoque (predominantemente) profundo lo hace con mayor
intensidad y conviccin que el que emplea un enfoque superficial, utilizando con ms
intensidad las estrategias y motivaciones profundas o de alto rendimiento que las
superficiales.
Tabla 2
Estadsticos y frecuencias de los enfoques de aprendizaje
Media / sd
F/ %
SA
31.75/5.983
43/15.3
DA
36.15/7.029
103/36.7
AA
36.20/8.005
135/48
978-84-695-8363-0
1052
personales y/o familiares; (8) Dificultad con la asignatura y problemas con el profesor/a; (9)
Dificultad con la asignatura y problemas personales y/o familiares; (10) Problemas con el
profesor/a y problemas personales/familiares; (11) Otros.
En la Tabla 3, observamos que el 24.9% de los estudiantes considera que la principal
causa de su fracaso escolar est relacionada con la dificultad de las asignaturas, seguida de la
desmotivacin/desinters (23.8%). En algunos casos, la combinacin de ambas causas tiene
tambin un peso importante (14.9%). Cabe destacar el escaso peso del factor Problemas
personales y/o familiares (1.10%).
Tabla 3
Factores que influyen en el fracaso escolar
GLOBAL
10
11
Perdidos
Frecuencia
67
70
42
17
12
36
Porcentaje
23.8
24.9
3.2
1.1
14.9
2.5
6.0
4.3
2.8
0.7
12.8
2.8
10
11
Perdidos
Frecuencia
53
82
82
11
13
14
Porcentaje
18.9
29.2
2.1
1.4
29.2
3.9
3.2
4.6
1.8
0.4
5.0
0.4
Discusin y conclusiones
Las conclusiones ms relevantes de este estudio pueden sintetizarse en que el enfoque
de aprendizaje predominante de los estudiantes que han participado en esta investigacin es
el de alto rendimiento, seguido del enfoque profundo, lo cual contrasta con los encontrados en
otros estudios previos en lo que el enfoque de alto rendimiento es el menos utilizado por los
estudiantes (Hernndez-Pina, Garca y Maquiln, 2001).
978-84-695-8363-0
1053
978-84-695-8363-0
1054
978-84-695-8363-0
1055
Resumen
En esta comunicacin se presenta un estudio cuya meta fue conocer la valoracin de
estudiantes universitarios sobre el cumplimiento de los principios del KnowledgeBuilding,
Estos principios son considerados elementos claves para facilitar el desarrollo de
comunidades de aprendizaje y la construccin de conocimiento. La muestra est compuesta
por 145 estudiantes universitarios. El Knowledge Building Principles Inventary (GutirrezBraojos. no publicado) fue aplicado para recoger la percepcin de los estudiantes sobre el
grado en el que las institucin educativa universitaria cumple con dichos principios. Este
instrumento consta de dos partes, la primera parte se conforma de 12 items en escala likert
de medicin. La segunda parte,se estructura en dos preguntas de respuesta abierta que
pretende recoger informacin sobre las razones y posibles soluciones a jucio de los
estudiantes. A partir de un anlisis descriptivo y un anlisis cualitativo, se presentan los
resultados y conclusiones sobre la percepcin de los estudiantes con respecto al
cumplimiento de los principios del Knowledge Building.
Descriptores: Knowledge Building, comunidades de indagacin y Educacin Superior.
Abstract
In this paper we present a study whose goal was to determine the valuation of university
students regarding compliance with the principles of Knowledge Building. These principles
are considered key elements to facilitate the development of learning communities and
knowledge construction. The sample consists of 145 college students. The Knowledge
Building Principles Inventory (Gutirrez-Braojos, unpublished) was used to collect the
perception of the students about the degree to which the university educational institution
complies with these principles. This instrument consists of two parts, the first part is made up
of 12-item Likert scale measurement. The second part is divided into two open-ended
questions intended to collect information on reasons and possible solutions. From a
descriptive analysis and a qualitative analysis, we present the results and conclusions about
the students' perceptions regarding compliance of the principles of Knowledge Building.
Keywords: Knowledge Building, Inquiry communities, Higher Education.
978-84-695-8363-0
1056
Introduccin
Durante los ltimos aos, la investigacin educativa ha centrando sus esfuerzos en
mejorar los procesos de aprendizaje y enseanza a partir de la implementacin de las
tecnologas educativas emergentes (Salmern, Rodriguez Fernndez,& Gutirrez-Braojos,
2010; Snchez Santamara & Morales Calvo, 2012). Dentro de estos estudios, una lnea
terica emergente se ha dirigido a analizar la construccin de objetos de conocimiento en
comunidades de indagacin. Las comunidades virtuales de indagacin hacen referencia a
grupos colaborativos que participan en espacios virtuales comprometidos con la construccin
de significados compartidos sobre artefactos conceptuales (Garrison y Akyol, 2013). Una de
las lneas de investigacin que estn tomando ms presencia en la produccin cientfica
reciente sobre comunidades de indagacin es la teora del Knowledge Building (Bereiter &
Scardamalia. 1993). Los tericos del Knowledge Building afirman que la eficiencia de estos
entornos est en funcin de que los estudiantes asuman una responsabilidad cognitiva con
respecto a la construccin de conocimiento y compromiso con la comunidades de indagacin
(e.g. Scardamalia, 2002). En este sentido Scardamalia ha elaborado 12 principios para facilitar
la participacin y la construccin del conocimiento en comunidad (Figura 1).
978-84-695-8363-0
1057
Mtodo
Participantes
En este estudio participaron 145 estudiantes matriculados en segundo curso delGrado
de Educacin Social, de la Faculta de Ciencias de la Educacin, en Granada (dos grupos) y la
Facultad de Educacin y Humanidades, en Ceuta (un grupo), ambas pertenecientes a la
Universidad de Granada. La muestra de este estudio fue seleccionada en el comienzo del
curso acadmico 2012-2013 mediante muestreo intencional en el que se consider,como
muestra invitada,a todoel alumnado matriculado en la materia troncal de Diagnstico de
Necesidades en Educacin Social, que se imparti, de forma simultnea y coordinada en
ambos Campus.
Instrumentos
Para recoger informacin sobre la percepcin de los estudiantes sobre el grado en el
que las institucin educativa universitaria cumple los principios del Knowledge Buildng se
utiliz el Knowledge Building Principles Inventary (Gutirrez-Braojos, documento indito).
Este instrumento consta de dos partes.La primera parte se conforma de 12 items sobre el
cumplimiento de dichos principios, a travs una escala likert de medicin, con valores
comprendidos entre "1" y "5"(siendo "1" totalmente desacuerdo. y "5" totalmente de acuerdo).
La segunda parte, esta compuesta por dos cuestiones de respuesta abierta que pretende
recoger informacin sobre las razones y posibles soluciones, a juicio de los estudiantes. El
anlisis de esta parte del cuestionario es de carcter cualitativo.La fiabilidad de la escala,
calculada a travs del Alfa de Cronbach fue de .822.
Procedimiento analtico
En base a los objetivos planteados, los anlisis realizados han consistido, por un lado
en estadsticos descriptivos como frecuencias, porcentajes y medias. Estos se han calculado en
funcin de las respuestas del alumnado a la escala. Por otro lado, se han realizado anlisis de
contenido de los datos cualitativos extrados de las cuestiones de respuesta abierta contenidas
en el Knowledge Building Principles Inventary.
Resultados
En trminos generales, como podemos observar en la Tabla 1, los datos indican que,
segn la opinin del alumnado, el cumplimiento de los principios de la Knowledge Building
Theory es infrecuente en el contexto educativo universitario. Tan slo el Principio de Uso
Constructivo de Fuentes Autorizadas cuya media se define como la puntuacin mxima
(3.23) destaca especialmente, siendo considerado de los ms trabajados en este contexto. Un
dato destacable es que, considerando las medias, ninguno de los principios acerca su
puntuacin a 5, agrupndose las puntuaciones comprendidas entre 2 Casi nunca, y 3
algunas veces (ver Grfico 1).
978-84-695-8363-0
1058
Tabla1
Principios del KnowledgeBuilding
Categor a
N
145
145
145
Mnimo
1.00
1.00
1.00
Mximo
5.00
5.00
5.00
Media
2.3862
2.6621
2.6897
Desv. tp.
.83488
.85975
.92434
145
1.00
5.00
2.5448
.85780
145
1.00
5.00
2.5517
.91993
145
1.00
4.00
2.7103
.94220
145
1.00
5.00
3.2345
.89763
145
1.00
5.00
2.6069
1.01582
145
1.00
5.00
2.8483
.89234
145
1.00
5.00
2.6483
.90163
145
1.00
4.00
2.3655
.91904
145
1.00
5.00
2.4759
1.06120
145
$
$
$
$
$
$
$
$
1,00
2,00
3,00
4,00
5,00
Valor
Una revisin de las respuestas elaboradas en el cuestionario abierto muestra que en sus
visiones generales sobre los principios y su representacin en contexto educativo, esta es una
posicin compartida:
SA: Los principios propuestos por el KnowledgeBulding me parecen muy correctos,
aunque la realidad del sistema educativo no guarde coherencia apenas con ellos.
978-84-695-8363-0
1059
1
2
3
4
5
Total
Perdidos Sistema
Total
Frecuencia
14
58
54
18
1
145
1
146
Porcentaje
9.6
39.7
37.0
12.3
.7
99.3
.7
100.0
Porcentaje
vlido
9.7
40.0
37.2
12.4
.7
100.0
Porcentaje
acumulado
9.7
49.7
86.9
99.3
100.0
978-84-695-8363-0
1060
Tabla 3
Principio de Responsabilidad Cognitiva Colectiva
Vlidos
1
2
3
4
5
Total
Perdidos Sistema
Total
Frecuencia
8
42
63
28
4
145
1
146
Porcentaje
5.5
28.8
43.2
19.2
2.7
99.3
1
146
Porcentaje
vlido
5.5
29.0
43.4
19.3
2.8
100.0
.7
100.0
Porcentaje
acumulado
5.5
34.5
77.9
97.2
100.0
978-84-695-8363-0
1061
Tabla 4
Principio de Autoevaluacin Transformativa Grupal
Vlidos
1
2
3
4
5
Total
Perdidos Sistema
Total
Frecuencia
29
48
42
22
4
145
1
146
Porcentaje
19.9
32.9
28.8
15.1
2.7
99.3
.7
100.0
Porcentaje
vlido
20.0
33.1
29.0
15.2
2.8
100.0
Porcentaje
acumulado
20.0
53.1
82.1
97.2
100.0
978-84-695-8363-0
1062
978-84-695-8363-0
1063
Resumen
Un contexto clave en el que la diversidad cultural se hace extensible es en los centros
educativos. Para que se produzca un contexto intercultural de xito es necesaria la
adquisicin de habilidades necesarias para interactuar y afrontar las demandas del nuevo
contexto. Por tanto, el objetivo general del presente estudio es analizar las competencias
interculturales en centros con diversidad cultural. Siguiendo el modelo de competencias
interculturales de Van der Zee y Van Oudenhoven (2000) compuesto por: Empata Cultural,
Flexibilidad, Apertura, Estabilidad Emocional e Iniciativa Social, se llev a cabo el estudio
en seis centros de secundaria de la Comunidad Valenciana, en el que participaron 1482
estudiantes de ESO y Bachillerato. Los resultados generales del estudio indicaron diferencias
significativas en competencias interculturales segn nacionalidad, pas de origen y
procedencia de los progenitores. As pues, proporcionar al alumnado oportunidades para el
contacto intercultural y exponerlos al ejemplo de buenas relaciones interculturales, son dos
medios importantes para fomentar la adaptacin entre el alumnado.
Descriptores: Competencias interculturales, Diversidad cultural, Secundaria.
Abstract
A key context in which cultural diversity is extended is in schools. An intercultural context of
success requires the acquisition of skills needed to interact and meet the demands of the new
context. Therefore, the overall objective of this study is to analyze intercultural competences
in culturally diverse secondary schools. According to Van der Zee and Van Oudenhoven
(2000) intercultural competences model composed by: Cultural Empathy, Flexibility,
Openmindedness, Emotional Stability and Social Initiative. We carried out the study in six
secondary schools of the Valencian Community, and 1482 students participated. Results
showed significant differences in intercultural competences regarding students nationality,
born country and parents origin. Provide students with opportunities for intercultural contact
and expose the example of good intercultural relations are two important ways to promote
adaptation among students.
Key words: Intercultural conpetences, Cultural diversity, Secondary school.
978-84-695-8363-0
1064
Introduccin
En la actualidad, el proceso de globalizacin hace que vivamos cada da ms en un
contexto de intercambio cultural, acercando las personas y las culturas. Este hecho, se hace
extensible y se visibiliza cada da ms en los centros educativos en el que la diversidad
cultural es una realidad. Sin embargo, para que se produzca un contexto intercultural de xito
es necesaria la adquisicin de competencias que faciliten la interaccin y el entendimiento
para afrontar las demandas del nuevo contexto intercultural que se crea. La adquisicin,
desarrollo y efecto de las competencias interculturales se han explicado desde diferentes
modelos (ver Spitzberg y Changnon, 2009). En particular, y desde el enfoque que se parte en
el presente estudio, el modelo de Desarrollo de la Sensibilidad Intercultural (Bennett, 1998)
de seis etapas, explica desde una perspectiva evolutiva, las reacciones de las personas respecto
a la diferencia cultural. En lneas generales, las tres primeras etapas son denominadas como
"etnocntricas", pues la persona valora de manera acentuada, su propia cultura de origen
respecto a la cultura de acogida. Pasando por las etapas de negacin, defensa y minimizacin.
Las tres siguientes etapas son las denominadas "etnorelativas", pues la persona relativiza la
superioridad de su cultura de origen y, en base a sus propias experiencias de vida, llega a
desarrollar verdaderamente un cierto grado de sensibilidad intercultural, pasando por las
etapas de aceptacin, adaptacin e integracin.
En lnea con este modelo, encontramos el modelo de competencia comunicativa
intercultural de Chen y Starosta (1996, 2000), en el que se manifiesta que para construir una
ciudadana global es necesario promover actitudes de reconocimiento, respeto, tolerancia e
integracin de las diferencias culturales. Para conseguir este propsito, se representa el
proceso desde tres perspectivas: cognitiva (conciencia intercultural), comportamental
(habilidad intercultural) y afectiva (sensibilidad intercultural). Esta ltima perspectiva, se
centra en las emociones o los cambios de sentimientos causados por situaciones particulares,
personas y ambientes, indicando que una persona competente interculturalmente es capaz de
proyectar y recibir respuestas emocionales positivas antes, durante y despus de las
interacciones interculturales (Chen y Starosta, 2000). Estos autores describen seis atributos
personales que pueden llegar a aplacar el impacto de las diferencias culturales: ser abierto de
mente, empata, autorregulacin, implicacin en la interaccin, autoconcepto y actitud de no
juzgar (Sanhueza, Paukner, San Martn y Friz, 2012). Atributos que estn en lnea con el
modelo de Van der Zee y Van Oudenhoven (2000), en el que en base a cinco competencias
interculturales se ha mostrado una relacin con la facilidad y apertura hacia otras culturas,
constatndose una relacin positiva entre las diferentes estrategias de aculturacin del modelo
de Berry (1997) y las cinco competencias interculturales que componen el modelo: iniciativa
social, empata cultural, flexibilidad, estabilidad emocional y apertura mental.
Estas cinco competencias han demostrado ser eficaces en contextos culturalmente
diversos (Carmona, 2011; Carmona, Van der Zee, Van Oudenhoven, y Orellana, 2012;
Carmona, Van der Zee y Van Oudenhoven, en prensa). As pues, para tener xito en estos
contextos sera necesario tener: Empata Cultural, que determina el inters en otras personas y
la sensibilidad hacia las creencias y sentimientos de los dems; Iniciativa Social, que refleja la
tendencia a tomar iniciativas de carcter social y crear fcilmente redes sociales; Estabilidad
Emocional, que es la capacidad de manejar el estrs producido por el proceso de adaptacin a
la nueva cultura; Flexibilidad, que es la competencia de cambiar las formas tradicionales de
proceder en su cultura a los nuevos estndares y procedimientos establecidos en la cultura de
acogida, y la Apertura, que hace referencia a la ausencia de prejuicios hacia otros grupos
culturales y a la actitud abierta hacia esos grupos. En lnea con estas competencias, recientes
978-84-695-8363-0
1065
estudios como el de Castro-Solano (2011), han mostrado que las variables de Apertura a
experiencias nuevas y Aceptacin de la diversidad cultural fueron clave en el proceso de
adaptacin. Estos resultados apoyan previos estudios en los que la empata cultural, la
sensibilidad cultural y el etnorelativismo son constructos trascendentes para comprender la
adaptacin de personas que toman contacto con contextos culturales diversos (Hammer,
Bennett y Wiseman, 2003).
En relacin con el contexto educativo, la institucin escolar es el principal mbito para
el contacto intergrupal y la aculturacin (Aguaded, 2006). Sin embargo, como afirman
Greenfield, Keller, Fuligni y Maynard (2003), los adolescentes, independientemente de su
contexto cultural, se enfrentan principalmente con tres retos propios: establecer, mantener y
finalizar relaciones sociales; adquirir nuevos conocimientos y habilidades; y lograr
autonoma. Estos aspectos hacen que el estudiante aprenda a afrontar el estrs emocional y
social que las relaciones intergrupales en contextos de mayor diversidad cultural producen y
lograr as una adaptacin exitosa. Sin embargo, de acuerdo con Vil (2006), en el contexto
educativo, la sensibilidad intercultural tiene una relacin directa con algunas particularidades
y comportamientos del alumnado, como pueden ser: el gnero, la identificacin cultural, la
procedencia del alumnado y familias, la percepcin sobre la competencia y usos lingsticos,
o de las amistades interculturales (Sanhueza y Cardona, 2009). Por tanto, el objetivo general
del presente estudio es 1) analizar si existen diferencias culturales en las cinco competencias
interculturales, y 2) examinar si existen diferencias en competencias interculturales en funcin
del binomio procedencia del alumnado-procedencia de sus progenitores.
Mtodo
Participantes
La muestra estaba compuesta por 1482 estudiantes de seis centros de la Comunidad
Valenciana, correspondientes a los diferentes niveles de la ESO (81.8%) y de Bachillerato
(18.1%), un 0.1% no respondi a esta pregunta. De los seis centros, tres eran concertados y
los otros tres pblicos. En la muestra, el 48.7% eran chicas, con una edad promedio de 14.57
aos (DT = 1.75), y un 20% del alumnado proceda de otros pases. En cuanto al pas de
nacimiento del alumnado, stos fueron agrupados de acuerdo con la clasificacin de culturas
de Gupta, Hanges y Dorfman (2002), resultando en que un 48.8% proceda de Latinoamerica,
un 19.69% de Europa del Este, un 5.3% de Asia, un 3.5% de la Europa Germnica, un 2.8%
de Europa del Sur, un 1.1% Africa Subsahariana, y un 0.7% de la cultura rabe. En cuanto a
sus progenitores, un 22.1% indic que provenan de otros pases.
Instrumento
El instrumento utilizado en el presente estudio se enmarca en un proyecto ms general
en el que se examinaban las competencias interculturales en relacin al bienestar psicolgico
del alumnado. En concreto, para este estudio se utilizaron las variables socio-demogrficas
(edad, gnero, pas de nacimiento, nacionalidad, procedencia de los progenitores), y
competencias interculturales.
Competencias interculturales. Se midi con el cuestionario Multicultural Personality
Questionnaire de Van der Zee y Van Oudenhoven (2000, 2001). Este cuestionario ha sido
validado y est formado por 91 tems agrupados en cinco factores y con un rango de respuesta
978-84-695-8363-0
1066
978-84-695-8363-0
1067
En Apertura Mental, los resultados nos muestran que el grupo Otra procedencia- Otra
procedencia, en comparacin con el grupo Espaa-Espaa presentan una menor ausencia de
prejuicios hacia otros grupos culturales y una actitud abierta hacia esos grupos. Y en
Iniciativa Social, el grupo Otra procedencia- Otra procedencia mostr una menor tendencia a
tomar iniciativas de carcter social y crear fcilmente redes sociales en comparacin con el
grupo Espaa-Otra procedencia y el grupo Espaa-Espaa.
Discusin
Los resultados del presente estudio muestran consenso con los resultados de otros
estudios con muestras de estudiantes internacionales, en el que una mejor adaptacin de los
estudiantes est relacionada con mayor empata cultural, apertura mental y flexibilidad
(Suanet y Van de Vijver, 2009). Podemos observar que existen diferencias entre los grupos
culturales en cuanto a competencias interculturales. En concreto, los resultados indicaron que
el alumnado procedente de pases asiticos tiene niveles ms bajos de empata cultural, y los
procedentes de pases africanos con una mayor apertura mental presentan una mayor ausencia
de prejuicios hacia otros grupos culturales y tienen una actitud abierta hacia ellos.
En cuanto a iniciativa social, los resultados encontrados mostraron que el grupo de
Asia tena menor iniciativa social en comparacin con el grupo de Europa del Este y el de
Espaa, y el de Latinoamrica en comparacin con el grupo Espaol. La estabilidad
978-84-695-8363-0
1068
978-84-695-8363-0
1069
978-84-695-8363-0
1070
978-84-695-8363-0
1071
Resumen
La presente comunicacin expone los resultados obtenidos en un estudio realizado con
estudiantes de ESO en el cual se aplic un programa de educacin en valores a travs de las
TIC. Para evaluar la eficacia del mismo se utiliz, entre otros instrumentos, un test
sociomtrico en un diseo cuasiexperimental, con medidas pre-postet y con grupos control y
experimental. Los resultados no reflejaron diferencias estadsticamente significativas (n.s.
.05) en los ndices sociomtricos. En cambio, se realizaron otras medidas sobre otro tipo de
variables en las que el programa s tuvo consecuencias y, por lo tanto, los resultados han
sido diferentes. Estos ya se han publicado en trabajos de Puyal, Olmos-Miguelez y otros,
2013 y de Pariente y Perochena 2013. El estudio forma parte del proyecto de investigacin
i+d EDU2009-08753, desarrollado por el Grupo de Evaluacin Educativa y Orientacin
(GE2O) de la Universidad de Salamanca.
Descriptores: evaluacin de programas, tecnologas de la informacin y comunicacin
(TIC), tcnicas sociomtricas, educacin en valores, Educacin Secundaria.
Abstract
The following communication presents the results of a study on Elementary Secondary
School, to whom we apply an educational program on values, through ICT. To value the
efficacy, we use, among other instruments, a sociometric test in a causiexperimental design
with pre-postest measures and control experimental groups. The results did not show
statistical differences (n.s. .05) in the sociometric indexes. In comparison, when
measurements for other variables upon which the program did have consequences, and
therefore, the results have been different. These have already been published in works by
Puyal, Olmos-Miguelez and others, 2013, and Pariente and Perochena, 2013. This study is
located in the investigation project i+d EDU2009-08753, developed by the Educational
Evaluation and Orientation Group (GE2O) at the University of Salamanca.
Keywords: program evaluation, ICT, sociometric techniques, values education, Elementary
Secondary Education.
978-84-695-8363-0
1072
Introduccin
La presente comunicacin tiene el objetivo de exponer los resultados derivados de una
investigacin realizada con alumnos de la Educacin Secundaria Obligatoria (ESO) en
Castilla y Len. El estudio consisti en la implementacin de un programa para educar en
valores utilizando como apoyo las TIC y una de las medidas de su eficacia se ha basado en el
uso de la sociometra. La evaluacin del resultado del programa se realiz mediante un diseo
cuasi-experimental pre-postest con grupo control y grupo experimental.
Breves apuntes tericos y un programa de desarrollo de valores en ESO
En este estudio, partimos de una serie de supuestos sobre el efecto de las relaciones
sociales entre los adolescentes sobre el aprendizaje en el aula. As, la cohesin grupal parece
que est relacionada con el ambiente de cooperacin entre los miembros de un grupo y
repercute de forma positiva en el rendimiento y que si el ambiente es ms bien competitivo, se
produce el efecto inverso (Coll, 1984, citado en Garaigordobil, 2005). Pliego (2011) reconoce
que un grupo en el que existe una cohesin grupal se presenta:
-
Pues bien, el diseo del programa, objeto de esta comunicacin, se sustenta en los
principios de la Educacin Personalizada (Galino, 1991). En la prctica educativa, la
educacin para la socializacin tiene tres principios como se muestra en la siguiente tabla.
Tabla 1
Principios de Galino (1991) en relacin con el diseo del programa
El diseo del programa
Se foment la colaboracin entre
los alumnos al permitir que
comentaran las entradas en el
blog que hablaban de sus
compaeros.
El reconocimiento
de
las
acciones positivas a los alumnos
estaba encaminado a que los
alumnos
las
descubriesen
satisfactorias.
En
especial
referido al valor de la solidaridad.
Este ha sido el punto neurlgico
del programa: la educacin en
valores.
Principio de
Colaboracin.
Descripcin.
A travs de tcnicas constructivas que favorecen el dilogo y
que dan por resultado el impulso positivo hacia la amistad, la
comprensin y el amor. Incluso se llega a la abnegacin en
pro de quien lo necesite.
Servicio.
Liderazgo.
978-84-695-8363-0
1073
978-84-695-8363-0
1074
caso, en todos y cada uno de los grupos (1A, 2A y 2B) existen personas que pertenecen al
control y al experimental. Unido a lo anterior, se obtuvieron los ndices de cohesin grupal y
de disociacin grupal referidos al curso y grupo al que pertenecan. Junto con los ndices de
popularidad individual y de antipata individual que fueron los que se utilizaron para
comprobar la incidencia del programa en las personas que pertenecan al control y al
experimental.
Hiptesis
De modo general planteamos la hiptesis del siguiente modo: La implementacin de
un programa para la educacin en valores a travs de las TIC modifica las redes sociales que
mantienen adolescentes en las aulas en la ESO.
Hiptesis nula
Ho
Hiptesis de
investigacin
H1
H2
Enunciado
No existen diferencias estadsticamente significativas (0,05) en los ndices
sociomtricos entre las personas que conforman el grupo experimental y el grupo
control, previos a la aplicacin del programa.
Enunciado
Existen diferencias estadsticamente significativas (0,05) en los ndices
sociomtricos entre las personas que conforman el grupo experimental y el grupo
control, posteriores a la aplicacin del programa.
Existen diferencias estadsticamente significativas (0,05) en los resultados pretest y
postest para cada uno de los cursos que conforman la muestra.
Variables
La variable independiente queda definida por la estrategia para la educacin en
valores, a travs de las TIC. La variable dependiente queda definida operativamente por la
medida resultante de los mencionados ndices sociomtricos.
Resultados
En primer lugar, indicaremos que tras las pruebas estadsticas efectuadas en la fase de
pretest, es posible afirmar la homogeneidad de los grupos control y experimental (=0,05). De
este modo, se afirma que no existan diferencias estadsticamente significativas en ambos
grupos previo a la aplicacin del programa.
ndices sociomtricos globales respecto a la muestra completa
Los valores sociomtricos individuales indican la posicin de las personas dentro del
grupo y posibilitan diferenciarlos en funcin de distintos criterios mientras que los ndices
grupales, como su nombre indica, nos permiten conocer el estado del grupo en su conjunto
(Barrasa y Gil, 2004). La media de los ndices sociomtricos individuales (popularidad y
antipata) de forma global, es decir para la muestra completa se presenta en la Tabla 2.
978-84-695-8363-0
1075
Tabla 2
Tabla de las medias y desviaciones tpica de los ndices de popularidad y antipata de la muestra
completa. (rango 0-1)
ndices de popularidad pretest
ndices de antipata pretest
Media
0.1479
0.1018
Desv. tp.
0.1082
0.1181
Cursos
1A
N=14
2A
N=22
2B
N=21
media
pretest
media
postest
0.1949
0.1846
0.2139
0.8337
0.1179
0.1795
-1.8240
0.0896
0.1342
0.1320
0.1078
0.9151
0.1039
0.1277
-0.9998
0.3288
0.1295
0.1295
1.7987
1.0000
0.0886
0.1091
-1.2520
0.2243
Interpretacin
No existen diferencia
estadsticamente significativa entre
las medias de los ndices de
popularidad ni en los de antipata
posterior a la aplicacin del
programa en ninguno de los cursos
porque en todos los casos los
valores de la prueba t se estuvieron
por encima de 0,05
978-84-695-8363-0
1076
Tabla 4
Tabla de comparaciones de las medidas pre y postest en las distintas mediciones sociomtricas
grupales
Media grupal del ndice de cohesin social
Media grupal del ndice de disociacin
Elecciones mutuas
Rechazos mutuos
media
pretest
0.2619
0.0952
11
4
media
postest
0.2381
0.0476
10
2
Disminuye
Disminuye
Disminuye
Disminuye
2A
N=22
0.2273
0.0303
15
2
0.2878
0.1515
19
10
Aumenta
Aumenta
Aumenta
Aumenta
2B
N=21
0.2381
0.0317
15
2
0.2553
0.0317
16
2
Aumenta
No vara
Aumenta
No vara
Cursos
Mediciones grupales
1A
N=14
El ndice de cohesin social, que se relaciona con las elecciones que las personas han
recibido, disminuye para el grupo de 1A y aumenta para los dos grupos de segundo en la
comparativa pre-postest. En relacin a las elecciones mutuas, aumentaron en todos los
grupos-clase, excepto en 1A. Se observa un aumento ligero en el ndice antipata (ndice
grupal) en la media grupal de la medida pretest a la medida postest en los tres grupos.
Mientras que para los rechazos mutuos, en el grupo de 1A s existe disminucin, en el de 2A
aumentan y para el de 2B no varan. Por tanto, en el grupo de 2A se han fortalecido los
sentimientos en el transcurso del tiempo, tanto aquellas opiniones positivas sobre los dems
como las negativas.
Conclusiones
Las conclusiones derivadas de la comprobacin de hiptesis se reflejan en la Tabla 5.
Tabla 5
Conclusiones en funcin de las hiptesis planteadas
Hiptesis de
investigacin
H1
H2
Hiptesis
Existen
diferencias
estadsticamente
significativas (0,05) en los ndices
sociomtricos (cohesin y disociacin)
entre las personas que conforman el grupo
experimental y el grupo control,
posteriores a la aplicacin del programa.
Existen
diferencias
estadsticamente
significativas (0,05) en los resultados
pretest y postest para cada uno de los
cursos que conforman la muestra.
Conclusin
Los anlisis sociomtricos llevados a cabo
reflejan una ausencia de modificaciones en
las relaciones sociales porque en los
resultados no se obtuvieron diferencias
estadsticamente significativas.
Los
resultados
obtenidos
de
las
comparaciones pre-postest de los cursos
reflejan que no se detectaron diferencias
estadsticamente significativas.
978-84-695-8363-0
1077
Discusin
Autores como Prez Prez (2007), despus de llevar a cabo un estudio similar al
nuestro, tampoco ha encontrado diferencias estadsticamente significativas (0,05) que se
esperaban como consecuencia de la revisin bibliogrfica realizada. Sin embargo, tanto ellos
como nosotros, podemos concluir que se han producido algunas modificaciones en el clima
del aula (muestras), al observar los resultados del anlisis sociomtrico. Hemos obtenido
resultados semejantes respecto a las relaciones sociales, porque en ambos casos se
favorecieron.
La experimentacin de Goldsworthy, Schwartz y Barab (2007) respecto a la
enseanza-aprendizaje de resolucin de conflictos tambin se considera semejante a la
nuestra. Ellos, a su vez, utilizaron las TIC como herramienta para trasmitir conocimiento. Es
posible coincidir en que las experiencias que se apoyan en estos medios permiten un
desarrollo cognitivo y un aprendizaje, desde la experiencia, que puede fijarse en la
personalidad con mayor impacto, por tanto, repercutir en el comportamiento y la sociabilidad
con las personas.
Con nuestra investigacin volvemos a poner en evidencia que la investigacin
educativa presenta diversas problemticas de validez interna y de validez externa; lo que
significa un enorme reto. Para poder afrontarlo es posible implementar la combinacin de
mtodos de recogida de datos y de estrategias de medicin. En primer lugar, el alto nmero
variables que se deben controlar generan una casustica incalculable (validez interna). A pesar
de implementar mecanismos para controlar dichas variables, las investigaciones en el campo
de las ciencias sociales son sumamente complejas. Desde la seleccin de las personas con las
que se trabajar y acceder a la poblacin, hasta el desarrollo de programas especficos donde
la generalizacin posterior resulta cuestionable (validez externa). As, nosotros hemos medido
otras variables con este mismo estudio cuyos resultados han sido ya publicados (Pariente y
Perochena, 2013; Puyal, Olmos-Miguelez, Gonzlez, y Rodrguez-Conde, 2013).
Revisando desde una perspectiva formativa nuestra investigacin y sus procedimientos
metodolgicos para la comprobacin de la hiptesis, podemos resaltar tres cuestiones. La
primera respecto a cmo se realiz el anlisis de los datos. Se utilizaron herramientas de
ofimtica bsica y posiblemente se hubiese obtenido mayor provecho de los datos si se
analizaran con un programa informtico especfico como el que proponen Barrasa y Gil
(2004). Algunos de los ndices que se pudieran haber calculado son la coherencia
(correspondencia de elecciones recprocas) e Intensidad grupal (grado de emisin de
elecciones y rechazos) (p. 331-332). Con ello podramos haber obtenido mayor informacin
sobre cada persona en relacin al grupo y diferenciar de una forma ms detallada lo ocurrido
con aquellos que pertenecan al grupo control en comparacin con aquellos del grupo
experimental. En segundo lugar, un conocimiento de la tcnica socimtrica con mayor
profundidad permitira justificar mejor las conclusiones obtenidas. En este sentido, el estudio
de Garca-Bacete (2006) podra servir como punto de partida para analizar los datos con
mayor precisin. Y, por ltimo, en definitiva, consideramos que, a pesar de las limitaciones
que puedan presentarse, actualmente la tcnica sociomtrica es la ms adecuada para
investigar sobre las relaciones sociales en el aula.
Por lo anterior, la sociometra como metodologa de anlisis de grupos sociales
permite conocer grficamente las relaciones entre las personas y obtener datos numricos
978-84-695-8363-0
1078
sobre el estado del grupo y de cada persona respecto al mismo. Sin embargo, parece que se
requiere el desarrollo de un soporte estadstico para poder extraer conclusiones.
Referencias
Arruga, A. (1983). Introduccin al test sociomtrico. Barcelona: Herder.
Barrasa, A. y Gil, F. (2004). Un programa informtico para el clculo y la representacin de
ndices y valores sociomtricos. Psicothema, 16 (4), 329-335.
Bartin, G. (1965). Los tests sociomtricos. Buenos Aires: Kapelusz.
Fontes, S., Garca, C., Prez-Llantada, M. C. y Sarri, E. (2001). Diseos de investigacin en
psicologa. Madrid: Universidad Nacional de Educacin a Distancia.
Galino, A. (1991). Personalizacin Educativa: Gnesis y Estado Actual en Educacin y
Pedagoga, Volumen 4 de Tratado de Educacin Personalizada. Madrid: Ediciones
Rialp.
Garaigordobil, M. (2005). Diseo y evaluacin de un programa de intervencin
socioemocional para promover la conducta prosocial y prevenir la violencia. Madrid:
Centro de Investigacin y Documentacin Educativa (C.I.D.E).
Garca-Bacete, F. J. (2006). La identificacin de los alumnos rechazados: comparacin de
mtodos sociomtricos de nominaciones bidimensionales. Infancia y Aprendizaje:
Journal for the Study of Education and Development, 29 (4), 437-452.
Garca-Bacete, F. J., Garca, I. y Monjas, M. I. (2008). Distribucin sociomtrica en las aulas
de chicos y chicas a lo largo de la escolaridad. Revista de Psicologa Social, 23 (1),
63-74.
Goldsworthy, R., Schwartz, N., Barab, S., Landa, A. (2007). Evaluation of a collaborative
multimedia conflict resolution curriculum. Educational Technology Research and
Development, 55, 6.
Martnez Otero, V. (2000). Formacin integral de adolescentes: Educacin personalizada y
programa de desarrollo personal (PDP). Madrid: Editorial Fundamentos.
Moreno, J. L. (1972). Fundamentos de la sociometra. Buenos Aires: Paids.
Pariente, J. L. y Perochena, P. (2013). Didctica de la educacin en valores en la ESO. Una
propuesta utilizando las tecnologas para el aprendizaje y el conocimiento. Pixel-Bit,
Revista de Medios y Educacin, 42, 195-208.
Prez Prez, C. (2007). Los efectos de la aplicacin de un programa de educacin para la
convivencia sobre el clima social del aula en un curso de 2 de ESO. Revista de
educacin, 343, 503-529.
Pliego, N. (2011). El aprendizaje cooperativo y sus ventajas en la educacin intercultural.
Hekademos: revista educativa digital, 8, 6376.
978-84-695-8363-0
1079
Ponce, M. (2001). La sociometra, una tcnica para la agrupacin del alumnado. Aula de
innovacin educativa, 116, 43-45.
Puyal, M. B., Olmos-Miguelez, S., Gonzlez, P. P., y Rodrguez-Conde, M. J. (2013).
Technology-Based Values Teaching in Secondary Education. In F. Garca-Pealvo
(Ed.), Multiculturalism in Technology-Based Education: Case Studies on ICTSupported Approaches (pp. 211-227). Hershey, PA: Information Science Reference.
doi:10.4018/978-1-4666-2101-5.ch013.
978-84-695-8363-0
1080
Resumen
El objetivo de nuestra investigacin es analizar las aportaciones que nos permite el
uso de la pizarra digital interactiva en el aula facilitando la incorporacin de
elementos grficos y visuales as como aumentando la motivacin y la capacidad de
atencin del alumnado con TEA (Trastorno del Espectro Autista) al presentar las
actividades usando las TIC como soporte principal. La metodologa utilizada sera la
investigacin en la accin con la incorporacin en el aula de estrategias didcticas que
faciliten la adquisicin de las competencias bsicas de este alumnado. Concluimos
desde un planteamiento a favor de una concepcin de la pizarra digital interactiva
como un elemento ms del proceso de aprendizaje as como la consideracin de
convertirse en un elemento facilitador de situaciones comunicativas tanto en aula
ordinaria como en aula especfica.
Descriptores: trastorno espectro autista, tecnologas de la informacin y la
comunicacin, pizarra digital interactiva, intervencin educativa, atencin a la
diversidad.
Abstract
The aim of our research is to analyze the contributions that allows the use of the
interactive whiteboard in the classroom to facilitate the incorporation of graphics and
visual elements as well as increasing motivation and attention span of students with ASD
(Autism Spectrum Disorder) to introduce the activities using ICT as main support. The
methodology would be the action research and the incorporation in the classroom of
teaching strategies that facilitate the acquisition of basic skills of these students. We
conclude from an approach in favor of a conception of interactive whiteboard as an
element of the learning process and the consideration of becoming a facilitator of
classroom communicative situations both ordinary and specific classroom.
Keywords: Autism Spectrum Disorder, Information and Communication Technology,
Interactive Whiteboard, Educational Intervention, Attention to Diversity.
Introduccin
En las ltimas dcadas, han ido aconteciendo importantes avances metodolgicos
significativos en cuanto a la forma de atender y dar respuesta a los alumnos con necesidades
978-84-695-8363-0
1081
978-84-695-8363-0
1082
Mtodo
Objetivos
Los objetivos de nuestra investigacin son analizar las aportaciones que nos permite el
uso de la pizarra digital interactiva para presentar la informacin grfica y visual
(pictogramas, fotografa, lenguaje escrito) en el proceso de aprendizaje del alumnado con
Trastorno del Espectro Autista.
Concretamente, pretendemos observar en qu medida se cumplen los 7 principios
establecidos en las investigaciones recogidas por R.E. Mayer (2001) en su Multimedia
Learning, sobre el empleo de Pizarra Digital Interactiva con un tipo de alumnado general,
pero esta vez dirigiendo dicha propuesta a nuestros alumnos con TEA.
Enfoque
Partiendo de la perspectiva global del objetivo de esta investigacin para llegar a una
aproximacin particular de la realidad a estudiar, se ha abordado el estudio desde el enfoque
cualitativo, ya que como seala Sandn, (2003, p. 123) dicho paradigma resulta ser una
Actividad sistemtica orientada a la comprensin en profundidad de fenmenos educativos y
sociales, a la transformacin de prcticas y escenarios socioeducativos, a la toma de
decisiones y tambin hacia el descubrimiento y desarrollo de un cuerpo organizado de
conocimientos .
La metodologa utilizada ser en la Investigacin en la Accin, que nos permita
analizar las ventajas del uso de la pizarra digital interactiva en el aula en la intervencin
educativa con el alumnado con TEA a travs de la observacin y la intervencin educativa
diaria.
Tambin se pretenden realizar, al menos, las siguientes acciones que doten a la
investigacin de unos criterios mnimos de calidad, como son:
-Triangulacin terica: revisin de la literatura publicada hasta el momento en relacin con la
formacin docente y el desarrollo profesional docente.
-Triangulacin interna: presencia de otro investigador mediante el desarrollo de las
actividades educativas con la PDI y coincidencia con la interpretacin de los hechos a travs
de la observacin.
-Triangulacin de fuentes: experiencias descritas por otras personas del mismo entorno, lo
cual se ha llevado a cabo a travs de la seleccin de dos maestros/educadores de distinto nivel
educativo pero pertenecientes al mismo centro.
Participantes y contexto
El planteamiento de nuestra investigacin se lleva a cabo con cinco alumnos con
Trastorno del Espectro Autista escolarizados en un colegio pblico en la localidad de San
Vicente del Raspeig (Alicante) en modalidad de Unidad de Educacin Especial ubicada en
Centro Ordinario con un programa de Inclusin Educativa en el Aula Ordinaria de referencia.
978-84-695-8363-0
1083
Los criterios de seleccin que se han seguido a la hora de la composicin del grupo han
sido de un lado, la disponibilidad personal de los mismos y de otro, tener como caracterstica
comn el diagnstico de Trastorno del Espectro Autista.
Instrumento
Se utiliza la tcnica de observacin participante, seguida de un registro de los hechos en
un diario de campo para la posterior interpretacin de los hechos, que se realiza al finalizar la
jornada educativa.
Tambin hemos utilizado una plantilla basada en los 7 principios establecidos por R.E.
Mayer segn sus investigaciones sobre Multimedia Learning, para ver en qu medida los
alumnos con TEA presentan una actitud especialmente beneficiosa ante metodologas que
sigan dichos principios.
Todo ello combinado con las tcnicas especficas y relacionadas con la naturaleza de la
tcnica de observador participante, como son una actitud positiva de escucha y anlisis, la
interpretacin veraz de los fenmenos vivenciados, observacin de la comunicacin no verbal
que se produce durante el encuentro y la reduccin de formalismos para conseguir un clima
confiado que estimule el desarrollo fluido de las actividades diseadas.
Procedimiento
El proceso seguido ha consistido en programar todas las actividades propuestas para el
grupo llevando a cabo la metodologa mencionada anteriormente, que implica el uso de la
PDI como herramienta donde situar el aprendizaje.
Se ha seguido la programacin establecida para cada uno de los alumnos ajustada a su
ACIS (Adaptacin Curricular Individualizada Significativa) y se ha trabajado en sesiones
tanto individuales como de pequeo grupo en aula ordinara y especfica.
Los materiales utilizados para el desarrollo de esta investigacin son todos
multimedia; as bien, unos son elaborados por los docentes utilizando el software propio de la
PDI (SmartNotebook), otros extrados de editoriales y otros de los compartidos por otros
docentes en la red.
As, durante el desarrollo de las actividades, la maestra y en ocasiones otra
investigadora presente en el aula, comprueban que los principios citados por R.E. Mayer
(2001) se cumplen con este tipo de colectivo. Y ms todava, se observa que se muestren
especialmente receptores a la informacin que se les explica mediante el uso de aplicaciones
digitales que cumplan con estos 7 principios.
Para evaluar el cumplimiento de los mismos, se observa y posteriormente se anota en un
diario de campo que sirve como registro. Adems, tambin se ha utilizado la plantilla adjunta
en el Anexo 1 para ver en qu medida se cumplen o no dichos principios.
Resultados
Tras la aplicacin de la programacin diseada mediante aplicaciones con soporte de
Pizarra Digital Interactiva se observa que las utilidades descritas anteriormente se cumplen
978-84-695-8363-0
1084
tambin con los alumnos con TEA y adems propician un aprendizaje ms concreto y
personalizado. El principal beneficio que encontramos son las posibilidades de
individualizacin de la enseanza a travs de la elaboracin rpida y sencilla de nuestros
propios materiales. Adaptar los contenidos a las caractersticas de nuestros alumnos resulta
ms fcil cuando trabajamos con materiales digitales.
Tambin se observa que la motivacin de los alumnos es mayor que utilizando otras
metodologas distintas a las convencionales y el proceso de enseanza/aprendizaje resulta ms
fluido.
Con respecto a los 7 principios detallados por R.E. Mayer (2001), se cumplen por
igual en nuestros alumnos con Trastorno del Espectro Autista y adems son especialmente
favorables para la enseanza de contenidos educativos debido a las caractersticas de este
colectivo. Se detallan en la Tabla 1 resultados obtenidos tras el anlisis del diario de campo de
los investigadores.
*Toda la informacin que aparece aqu detallada se completar con vdeos, fotografas y
ejemplos de materiales durante la exposicin del trabajo.
Tabla 1
Establecimiento de evidencias a partir de los principios de Mayer y experiencias con la PDI en
alumnos con TEA
Principio
multimedia
Principio
contigidad
espacial
Principio
contigidad
temporal
Principio
coherencia
Principio
modalidad
Principio
redundancia
Principio
diferencias
individuales
978-84-695-8363-0
1085
Discusin
978-84-695-8363-0
1086
Por ltimo, desde una observacin crtica, cabe decir que el presente trabajo se realiza a
partir de un grupo reducido de participantes y que, constituye una aproximacin a los
mltiples beneficios que conlleva el uso de la Pizarra Digital Interactiva con alumnos con
Trastorno del Espectro Autista, por lo que sera recomendable exportar experiencias similares
a otros contextos educativos o familiares a fin de disponer de una educacin ms inclusiva,
amplio y diversa.
Referencias
Ainscow, M. (1995). Necesidades especiales en el aula. Gua para la formacin del
profesorado. Madrid: Narcea.
Arnaiz, P. (2003): Educacin Inclusiva: Una escuela para todos. Archidona: Aljibe.
Alcantud, F. (2000). Nuevas Tecnologas, Viejas Esperanzas. En VVAA. Nuevas
Tecnologas. Viejas Esperanzas: las nuevas tecnologas en el mbito de la
discapacidad y las necesidades educativas especiales. Murcia: Consejera de
Educacin y Universidades.
Marchesi, A. y otros (2002). Desarrollo psicolgico y educacin. Vol. III. Madrid: Alianza.
Marqus, P. (2007). La innovacin educativa con la pizarra digital. Revista Innovacin y
Formacin, 1(1), 14.
Miano, J. A., Rabadn, C., Salinas, I., Micol, A. B. (2008). Comunicacin Aumentativa en
Autismo: un ejemplo prctico. CEE Las Boqueras Murcia.
Lled, A. y otros (2008). La pizarra digital en la educacin del alumnado con Sndrome de
Asperger. Revista de Psicologa INFAD: Internacional Journal of Developmmental
and Educational Psicology. Psicologa y relaciones internacionales en el ciclo de
vida, 225-231.
Tortosa, F. y De Jorge, E. (2000). Uso de las tecnologas informticas en un centro especfico
de ni@s autistas. En VV.AA. Nuevas Tecnologas, Viejas Esperanzas: las nuevas
tecnologas en el mbito de la discapacidad y las necesidades educativas especiales.
Murcia: Consejera de Educacin y Universidades.
Tortosa, F. (2004). Tecnologas del espectro autista: gua para docentes. Murcia: CPR
Murcia.
Referencias en la web
Gua TIC para personas con TEA. Recuperado el 29 de abril de 2013 de:
http://www.guiatictea.org/
978-84-695-8363-0
1087
ANEXO 1
Segn las investigaciones recogidas por R.E. Mayer en su Multimedia learning (2001) la
Pizarra Digital es un producto diseado segn 7 principios:
1. Principio multimedia: presentar la informacin acompaada de imgenes, vdeos, sonido,
etc.
2. Principio de la contigidad espacial: la informacin tiene continuidad, no han de tener
distintos conocimientos en distintos lugares en los que buscar.
3. Principio de contigidad temporal: El hecho de poder insertar materiales multimedia y el
uso de hiperenlaces permiten presentar los conocimientos de forma simultnea, no
sucesivamente.
4. Principio de coherencia. Los conocimientos expuestos y sobre los que se trabaja estn
relacionados sin distracciones adicionales.
5. Principio de modalidad. El uso de material multimedia permite que los estudiantes
asimilen mejor los conocimientos.
6. Principio de redundancia. El uso de distintos elementos acompaando una informacin
permite a los alumnos aprender mejor y reforzar lo aprendido
7. Principio de las diferencias individuales. Permite individualizar el aprendizaje.
978-84-695-8363-0
1088
Resumen
La diversidad cultural en nuestras aulas sigue planteando escenarios sobre los que avanzar.
Se han identificado distintas competencias interculturales como indicadores de la facilidad
de relacin con otras culturas. Tanto el gnero como la edad son factores que pueden incidir
de manera diferencial en el desarrollo de estas competencias. Sin embargo, la relacin de
estas variables con las competencias interculturales, sigue siendo objeto de anlisis y debate
(Garaigordobil y Maganto, 2011; Rueckert, 2011). El objetivo del presente trabajo es
analizar las relaciones entre las competencias interculturales y el gnero y la edad. La
muestra es de 1482 estudiantes de ESO y Bachillerato, 48.7% eran chicas con 14.57 aos de
edad promedio. Se ha utilizado el Multicultural Personality Questionnaire (Van der Zee y
Van Oudenhoven, 2000, 2001) con cinco factores (Empata Cultural, Flexibilidad, Apertura,
Estabilidad Emocional e Iniciativa Social). Aparecen diferencias significativas en cuatro de
las dimensiones en funcin del gnero.
Descriptores: competencias interculturales, diversidad cultural, gnero y edad.
Abstract
Cultural diversity in our classrooms continues to confront us with new scenarios. Some
Intercultural Competences have been identified as facilitators in relationships with other
cultures. Gender and age can influence in the development of these competences. However,
the relationship between these is still a subject for debate and analysis (Garaigordobil y
Maganto, 2011; Rueckert, 2011). The objective of the present study is to examine the
relationship between intercultrual competences, gender and age. The sample comprises of
1482 ESO and Bachillerato students, 48.7% were girls and the mean age was 14.57. The
Multicultural Personality Questionnaire (Van der Zee y Van Oudenhoven, 2000, 2001) has
been administered with five factors (Cultural Empathy, Flexibility, Openmindedness,
Emotional Stability and Social Initiative). The results showed statistically significant gender
differences.
Keywords: intercultural competences, cultural diversity, gender and age.
978-84-695-8363-0
1089
Introduccin
La diversidad cultural en nuestras aulas y nuestra cultura es un hecho palpable que nos
enriquece y, a su vez, nos sigue planteando retos y escenarios sobre los que avanzar. Una
lnea de investigacin importante en esta rea es la relativa a las competencias interculturales
(Aguado, 2004). La comprensin de cmo funcionan esta competencias y el desarrollo de las
mismas tiene una especial relevancia para los profesionales en distintas reas, pero
especialmente en el rea de la educacin (Buenda, 2004; Jokikokko, 2010).
De este modo, se han identificado distintas competencias interculturales como
indicador de la facilidad de relacin y apertura a otras culturas. Uno de los modelos de
competencias utilizado es del de Van der Zee y Van Oudenhoven (2000, 2001) que
comprende cinco competencias interculturales que son: Empata Cultural o inters en otras
personas y la sensibilidad hacia los sentimientos de los dems y sus creencias; Apertura
Mental, referida a la ausencia de prejuicios rgidos hacia otros grupos culturales, sus
comportamientos y hbitos culturales, as como una actitud abierta hacia esos grupos;
Iniciativa Social, que refleja la tendencia de la persona a abordar activamente las situaciones
sociales, tomar iniciativas y crear redes sociales; Estabilidad Emocional o capacidad de
mantener la calma frente a los cambios del contexto y al manejo eficaz del estrs en el
proceso de adaptacin a otras culturas; y Flexibilidad o capacidad para cambiar los
comportamientos habituales a las nuevas formas y procedimientos necesarios para la
adaptacin al nuevo entorno cultural.
El instrumento utilizado por Van der Zee y Van Oudenhoven (2000, 2001) para medir
dichas competencias es el Multicultural Personality Questionnaire (MQP) que, en los
ltimos aos, ha sido objeto de una considerable atencin en la investigacin emprica (ChanHoong, 2007; Ponterotto, Costa-Wofford, Brobst, Spelliscy, Kacanski, Scheinholtz y
Martines, 2007; Rushton e Irwing, 2009; Carmona, 2011; Carmona, Van der Zee, Van
Oudenhoven, y Orellana, 2012; Carmona, Van der Zee y Van Oudenhoven, en prensa).
La asuncin de base de este modelo es que existe una serie de competencias que
permiten, entre otros aspectos, unas interacciones interculturales adecuadas y satisfactorias
(Van der Zee y Van Oudenhoven, 2000), otros autores han sealado la relacin de estas
competencias con el bienestar psicolgico en general (Ponterotto, et al, 2007), o su papel
central para la superacin del racismo y la discriminacin (Aguado, 2004), de ah la
importancia de las mismas.
Los estudios realizados a partir de este modelo se han centrado en diversas muestras
pero no en estudiantes de ESO y Bachillerato. Sin embargo, estas etapas son especialmente
relevantes ya que suponen un mbito de contacto directo con personas de otras culturas y un
periodo educativo en el que se cuestionan ideas y se pasa por cambios de identidad entre otros
procesos (Aguado, 2004; Vil, 2006).
No obstante, hay toda una serie de factores que pueden estar incidiendo de manera
diferencial en el desarrollo de algunas de estas competencias. Tanto el gnero como la edad se
han planteado como variables que afectan de manera diferencial a las puntuaciones obtenidas
en distintos estudios. De este modo, algunas de las investigaciones realizadas con el modelo
de 5 factores y utilizando Multicultural Personality Questionnaire (MQP) han encontrado
patrones de puntuaciones diferentes en funcin de estas variables. En estudios realizados con
estudiantes universitarios y adultos no universitarios los hombres tenan mayores
978-84-695-8363-0
1090
puntuaciones en Estabilidad Emocional que las mujeres (Van der Zee y Brinkmann, 2004;
Van der Zee y Van Oudenhoven, 2000; Van der Zee, Zaal y Piekstra, 2003) y las mujeres en
Empata Cultural (Van der Zee et al., 2003). Respecto a la edad en algunos estudios no se han
encontrado diferencias (Van der Zee y Van Oudenhoven, 2000; Van der Zee et al., 2003),
mientras que en otros las puntuaciones en Estabilidad Emocional son ms altas en las
personas de mayor edad. Ponterotto et al. (2007) encuentran nicamente diferencias
Adaptabilidad, que subsume Estabilidad Emocional y Flexibilidad, donde los hombres tienen
puntuaciones ms altas, pero no en funcin de la edad.
En nuestro contexto, en un estudio con adolescentes Vil (2006) seala que ni el
gnero, ni la edad inciden en el grado de sensibilidad intercultural, sealando, no obstante que
el gnero es una variable importante. Por su parte, Garaigordobil y Maganto (2011) obtienen
que las chicas tienen puntuaciones superiores en Empata en todas las edades, producindose
un incremento de esta con la edad durante la adolescencia, pero slo en las chicas. Por su
parte en el estudio realizados por Ingls, Pastor, Torregrosa, Redondo y Garca (2009) con
una muestra de adolescentes los chicos puntan ms alto en Estabilidad Emocional.
Sin embargo, la relacin de estas variables, sobre todo el gnero, con alguna de las
competencias interculturales identificadas, como la empata, sigue siendo objeto de anlisis y
debate (King y Baxter, 2005; Lozano y Etxebarria, 2007; Garaigordobil y Maganto, 2011;
Rueckert, 2011). En este sentido, Rueckert (2011) seala que en los estudios de autoinforme,
los altos niveles de empata obtenidos con muestras de mujeres son debidos
fundamentalmente a las caractersticas de las demandas o cuestiones planteadas, mientras que
estas diferencias desaparecen cuando se utilizan otro tipo de metodologas.
El objetivo del presente trabajo es avanzar en esta lnea mediante el anlisis de las
competencias interculturales en estudiantes de ESO y Bachillerato de la Comunidad
Valenciana y de las relaciones entre dichas competencias y el gnero y la edad, para
posteriormente analizar el sentido de las posibles diferencias. En concreto se plantea 1)
analizar si existen diferencias en las cinco competencias interculturales y el gnero, y 2)
tambin entre las cinco competencias y la edad.
Mtodo
Participantes
La muestra del estudio es de 1482 estudiantes que proceden de 6 centros educativos de
la Comunidad Valenciana, cinco de la provincia de Valencia y uno de Castelln. La mitad de
los centros eran concertados y la mitad pblicos. El 81.8% de los estudiantes estaban
distribuidos en los cuatro niveles de la ESO y el 18.15% cursaban Bachillerato, un 0.1% no
respondi a esta pregunta. El 48.7% eran chicas y la edad media estaba en 14.57 aos
(DT=1.75).
Las edades de los estudiantes estaban comprendidas entre los 12 a los 22 aos, en
concreto de 12 aos haba un 13.2%, de 13 un 18.6%, de 14 un 19%, de 15 un 16.5%, de 16
un 15%, de 17 un 12.5% y de edades comprendidas entre 18 y 22 aos. Respecto al curso que
estaban estudiando en 1 de la ESO estaban un 25% de los estudiantes, en 2 de la ESO un
21.9%, en 3 de la ESO un 19.1%, en 4 un 16.1%, en 1 de Bachillerato un 11.2% y en 2 un
6.8%.
978-84-695-8363-0
1091
Instrumento
El presente estudio se enmarca dentro de un proyecto ms amplio que tiene como
objetivo analizar las relaciones entre las competencias interculturales y distintas variables
relativas al bienestar psicolgico del alumnado. Este trabajo se centra en el anlisis de las
relaciones entre las competencias interculturales y las variables gnero y edad.
Las competencias interculturales se han medido con el cuestionario desarrollado por
Van der Zee y Van Oudenhoven (2000, 2001), el Multicultural Persoanlity Questionnaire
(MQP). Est formado por 91 items agrupados en 5 factores: Empata Cultural (18 tems),
Apertura Mental (18 tems), Iniciativa Social (17 tems), Estabilidad Emocional (20 tems) y
Flexibilidad (18 tems). El rango de respuesta es de 1 totalmente no aplicable a 5 totalmente
aplicable. La consistencia interna de los 5 factores ha sido buena.
Procedimiento
En primer lugar, se realiz un muestreo intencional, seleccionndose los centros
escolares con presencia de alumnado de origen espaol y no espaol. En segundo lugar, se
solicit al equipo directivo y a los padres y madres su participacin en la investigacin. La
cumplimentacin del cuestionario se realiz en las aulas durante las sesiones de tutoras en
presencia de algn miembro del equipo investigador, excepto en el centro de Castelln donde
fueron los propios coordinadores y tutores quieren realizan el pase del cuestionario.
Anlisis estadsticos
Se han realizado anlisis diferenciales en funcin del gnero, prueba t de Student, y de
la edad, anlisis de varianza (ANOVA) de un factor con 7 grupos con el programa estadstico
SPSS 19. Para completar estos anlisis se procedi a realizar un nuevo anlisis de varianza en
el que se introdujo el curso en lugar de la edad como variable independiente, con el objetivo
de comprobar si en esta variable diferan los resultados.
Resultados
Los resultados obtenidos en funcin del gnero muestran diferencias estadsticamente
significativas para las cinco competencias interculturales consideradas en este estudio (ver
Tabla 1). En este sentido, las chicas obtienen puntuaciones ms altas en la Empata Cultural,
la Apertura Mental y la Flexibilidad. Sin embargo, en Iniciativa Social y Estabilidad
Emocional son los chicos los que obtienen puntuaciones superiores.
978-84-695-8363-0
1092
Tabla 1
Anlisis diferenciales en funcin del gnero
Empata Cultural
Apertura Mental
Iniciativa Social
Estabilidad
Emocional
Flexibilidad
Gnero
Chica
Chico
Chica
Chico
Chica
Chico
Chica
Chico
Chica
Chico
N
715
734
715
734
716
734
716
734
717
734
Desviacin
tpica
,47406
,52551
,53522
,54576
,49025
,45769
,48195
,44669
,38338
,38170
Media
3,8631
3,6137
3,3943
3,2971
3,4165
3,4672
2,9704
3,2526
3,2669
3,1816
T
9.492**
3.422**
-2.034*
-11.558**
4.247**
Apertura Mental
Iniciativa Social
Estabilidad
Emocional
Flexibilidad
Inter-grupos
Intra-grupos
Total
Inter-grupos
Intra-grupos
Total
Inter-grupos
Intra-grupos
Total
Inter-grupos
Intra-grupos
Total
Inter-grupos
Intra-grupos
Total
Suma de
cuadrados
1,179
380,965
382,143
3,944
424,633
428,577
2,506
324,885
327,391
1,265
341,241
342,506
,232
214,802
215,035
gl
6
1444
1450
6
1444
1450
6
1445
1451
6
1445
1451
6
1446
1452
Media
cuadrtica
,196
,264
F
,745
,657
,294
2,235*
,418
,225
1,858
,211
,236
,893
,039
,149
,261
978-84-695-8363-0
1093
los grupos de 3 de la ESO y 1 de Bachillerato, siendo la media de este ltimo curso ms alta
(M = 3.43, DT = .48) que la del primero (M = 3.28, DT = .52).
Tabla 3
Anlisis de varianza en funcin del curso
Empata Cultural
Apertura Mental
Iniciativa Social
Estabilidad
Emocional
Flexibilidad
Inter-grupos
Intra-grupos
Total
Inter-grupos
Intra-grupos
Total
Inter-grupos
Intra-grupos
Total
Inter-grupos
Intra-grupos
Total
Inter-grupos
Intra-grupos
Total
Suma de
cuadrados
2,627
384,683
387,311
4,525
425,818
430,344
,336
329,726
330,062
1,027
343,762
344,789
,761
215,850
216,611
gl
5
1458
1463
5
1458
1463
5
1459
1464
5
1459
1464
5
1460
1465
Media
cuadrtica
,525
,264
F
1,992
,905
,292
3,099*
,067
,226
,297
,205
,236
,872
,152
,148
1,029
Discusin
Los resultados obtenidos en este trabajo nos indican que las estudiantes tienen una
mayor empata respecto a otras culturas, tienen una mayor apertura social y son ms flexibles;
mientras que los estudiantes tienen una mayor estabilidad emocional y una mayor iniciativa
social. Por otra parte, podemos afirmar que no hay diferencias en funcin de la edad ni del
nivel que estn cursando los alumnos.
Estos resultados nos invitan a reflexionar sobre dos aspectos. El primero es la
importancia del desarrollo de las competencias interculturales en los centros educativos. El
segundo, las diferencias en las mismas en funcin del gnero y las perspectivas a adoptar en
la interpretacin de las mismas.
Respecto al primero hay un alto consenso en cuanto a su consideracin como un
objetivo bsico (Aguado, 2004; Vil, 2006; Jokikokko, 2010). En cuanto al segundo, no es
suficiente afirmar que existen tales diferencias, sino que habra que cuestionarse por qu
existen, como sealan Garaigordobil y Maganto (2011) es posible interpretarlo desde las
teoras de la socializacin de gnero, en este sentido, datos de este tipo apuntaran ms a
modificar las pautas de socializacin utilizadas con los estudiantes. Rueckert (2011) por su
parte seala que uno de los estereotipos ms prevalentes en nuestra cultura es que las mujeres
son ms afectuosas, orientadas hacia las personas y empticas que los hombres, pero la
literatura cientfica al respecto es mixta y, en el caso de la empata, los resultados varan en
funcin de la medida utilizada y de diversos factores contextuales.
La competencia intercultural es un constructo multifactico y complejo y la educacin
en este sentido supone una aproximacin mucho ms comprehensiva al mismo (King y
978-84-695-8363-0
1094
Baxter, 2005). Quiz sean los entornos sociales los que estn dando lugar a estos
estereotipos fomentando el funcionamiento diferente en cada uno de los gneros,
respondiendo a la produccin social e histrica de identidades de gnero asimtricas.
Tanto desde teora de la identidad social de Tajfel y Turner (1986) como desde las
aportaciones de Bourdieu (1999) se ha hecho un especial hincapi en cmo el contexto social,
con matizaciones diferenciales, determina la propia identidad, y, por lo tanto, podemos
cuestionar el tipo de identidad social que estamos fomentando y que subyace, por tanto, al
desarrollo de las competencias interculturales.
Referencias
Bourdieu, P. (1999). La dominacin masculina. Barcelona: Anagrama.
Buenda, L., Gonzlez, D., Pozo, T. y Snchez, C. A. (2004). Identidad y Competencias
Interculturales. Revista electrnica de investigacin y evaluacin educativa
(RELIEVE), 10, 135-183.
Carmona, C. (2011, Septiembre). La Relacin entre competencias interculturales y apoyo
social en estudiantes internacionales de educacin superior. Comunicacin
presentada en el XV Congreso Nacional y I Internacional de Modelos de
Investigacin Educativa. Investigacin y Educacin en un mundo en red, Madrid.
Carmona, C., Van der Zee, K. y Van Oudenhoven, J. P. (en prensa). Competencias
interculturales: aspecto clave para la internacionalizacin. En R. Hernndez y N.
Orellana, (Eds.), Educacin Superior: Gestin, Innovacin e Internacionalizacin (pp.
xx-xx). Valencia: Publicacions de la Universitat de Valncia.
Carmona, C., Van der Zee, K., Van Oudenhoven, J. P. y Orellana Alonso, N. (2012,
Septiembre). Intercultural competences: A key factor to international students
adaptation. Comunicacin presentada en The European Conference on Educational
Research, Cdiz.
Garaigordobil, M. y Maganto, C. (2011). Empata y resolucin de conflictos durante la
infancia y la adolescencia. Revista Latinoamericana de Psicologa, 43, 255-266.
Ingls, J., Pastor, Y., Torregrosa, M.S., Redondo, J., y Garca, J.M. (2009). Diferencias en
funcin del gnero y el curso acadmico en dimensiones del autoconcepto: Estudio
con una muestra de adolescentes espaoles. Anuario de Psicologa, 40, 271-282.
King, P. M., y Baxter, M. B. (2005). A developmental model of intercultural maturity.
Journal of College Student Development, 46, 571-592.
Rueckert, L. (2011). Gender differences in empathy. En D.J. Scapaletti (Ed.), Psychology of
Empathy (pp. 221-234). NY: Nova Science Publishers.
Tajfel, H. y Turner, J. C. (1986). The social identity theory of inter-group behavior. En S.
Worchel y L. W. Austin (Eds.), Psychology of Intergroup Relations (pp. 7-24).
Chigago: Nelson-Hall.
978-84-695-8363-0
1095
Van der Zee, K. I., y Van Oudenhoven, J. P. (2001). The multicultural personality
questionnaire: Reliability and validity of self- and other ratings of multicultural
effectiveness. Journal of Research in Personality, 35, 278-288.
Van der Zee, K. I., y Van Oudenhoven, J. P. (2000). The multicultural personality
questionnaire: A multidimensional instrument of multicultural effectiveness. European
Journal of Personality, 14, 291-309.
Van der Zee, K. I., y Brinkmann, V. (2004). Construct validity evidence for the Intercultural
Readiness Check against Multicultural Personality Questionnaire. International
Journal of Selection and Assessment, 12, 285-290.
Van der Zee, K. I., Zaal, J.N., y Piekstra, J. (2003). Validations of the Multicultural
Personality Questionnaire in the context of personnel selection. European Journal of
Personality, 17, 77-100.
Vil, R. (2006). La dimensin afectiva de la competencia comunicativa intercultural en la
educacin secundaria obligatoria: Escala de sensibilidad intercultural, Revista de
Investigacin Educativa, 24, 353-372.
Rushton, J. P., e Irwing, P. (2009). A general factor of personality in the Comrey Personality
Scales, the Minnesota Multiphasic Personality Inventory-2, and the Multicultural
Personality Questionnaire. Personality and Individual Differences, 46, 437-442.
978-84-695-8363-0
1096
Resumen
El trabajo que se presenta forma parte de un estudio ms amplio cuya finalidad ha sido
aportar unas directrices para el diseo de un modelo de evaluacin para los Centros
Residenciales de Accin Educativa en Catalua. Uno de los objetivos de la primera fase, en
la que se centra este estudio, ha sido identificar las opiniones de los profesionales implicados
en estos centros, en relacin a la situacin actual y sus necesidades. La naturaleza
comunicativa de la prctica profesional desarrollada en estos centros nos ha llevado a poner
en marcha una estrategia de recogida de informacin basada en el discurso y capaz de
recoger la diversidad argumentativa de los protagonistas de estos centros. En este trabajo
presentamos el proceso metodolgico seguido para el diseo e implementacin de los dos
grupos de discusin desarrollados, as como las temticas ms presentes en los debates
mantenidos y las conclusiones alcanzadas.
Descriptores: Centros de Nios, Grupo de Discusin e Investigacin Evaluativa.
Abstract
The work presented is part of a larger study whose purpose was to provide guidelines for the
design of an assessment model for Residential Education Action Centers in Catalonia. One of
the objectives of the first phase, which this study is focused in, was to identify the views of the
professionals involved in these centers compared to the current situation and needs. The
communicative nature of the professional practice developed in these centers has led us to
implement a data collection strategy based on speech and to be able to pick argumentative
diversity of the protagonists of these centers. In this paper we present the methodological
process followed for the design and implementation of two discussion groups developed as
well as the most popular topics that have been found in the discussions and the reached
conclusions.
Keywords: Children, Centers, Group Discussion and Evaluative Research.
44
Este trabajo forma parte de la Tesis Doctoral de Pilar Morros i Vigil titulada: La mejora de la calidad en los
centros residenciales de accin educativa. criterios para su evaluacin. Dirigida por Teresa Pozo Llorente y
Jos Gutirrez Prez (2012).
978-84-695-8363-0
1097
Introduccin
Los Centros Residenciales de Accin Educativa (CRAE) son instituciones de
proteccin a la infancia destinadas a acoger nios y nias en situacin de desamparo y que les
permitan recuperarse de las lesiones y secuelas fsicas y/o emocionales sufridas en el entorno
familiar. Los CRAE suponen un espacio residencial que acoge y educa a partir del vnculo
educativo y de la convivencia.
La slida estructura organizativa que deben tener estas instituciones de acogida, la
importancia de la relacin educativa, la necesidad de que los profesionales se alineen con el
Proyecto Educativo de Centro con el fin de dar cumplimiento al importante encargo social
reciben los CRAE, son entre otros, algunos de los motivos que apelan a los profesionales de
la educacin social a impulsar lneas de actuacin destinadas a la mejora de la calidad.
El trabajo que se presenta se centra en el quehacer cotidiano de los distintos
profesionales de estos centros y el protagonismo que en ellos debe tener la evaluacin.
Este trabajo se ubica en la primera fase de una investigacin ms amplia cuyo
propsito ha sido aportar unas directrices para el diseo de un modelo de evaluacin de los
CRAE de Catalua. Esta investigacin se ha estructurado en cuatro fases, siendo el objetivo
de la primera de ellas definir, de manera consensuada, unos criterios e indicadores de calidad
que orienten la organizacin, gestin, programacin e intervencin educativa en estos centros.
El punto de arranque para responder a este objetivo ha sido la caracterizacin de los CRAE
desde la perspectiva de los profesionales implicados en ellos. Qu percepcin y qu opinin
tienen estos profesionales sobre la situacin actual de estos centros, qu estructuras
organizativas seran las ms adecuadas para dar una respuesta especfica y experta a los nios
y nias acogidos en estas instituciones, qu necesidades de mejora detectan en su quehacer
profesional, qu es para estos profesionales un centro de calidad y qu presencia tiene la
evaluacin en el discurso de estos profesionales, son algunas de las cuestiones abordadas en
los grupos de discusin desarrollados en la fase inicial del estudio realizado y que se presenta
en este trabajo.
El grupo de discusin (en adelante GD) ha sido la estrategia metodolgica utilizada
para acceder a las opiniones, argumentos enfrentados y reflexiones que los profesionales de
estos centros tienen en torno a estas cuestiones.
La gran diversidad de argumentos en torno a este tema y la distribucin geogrfica de
los participantes, nos llev a disear dos grupos de discusin ubicados en Lleida y Barcelona.
En este trabajo presentamos el proceso seguido para el diseo y desarrollo de esta estrategia,
el procedimiento de anlisis del discurso de los participantes y las conclusiones alcanzadas.
Mtodo
La naturaleza comunicativa y social de la prctica profesional desarrollada en los
centros objeto de nuestra investigacin, nos ha llevado a considerar el grupo de discusin
como la estrategia de recogida de informacin ms idnea por su carcter comunicativo,
abierto y flexible y por su capacidad para que el moderador se adapte al proceso de reflexin
y debate que se origine en el grupo alejarse de los objetivos del trabajo (Krueger, 1991;
Rodrguez et al, 1996; Callejo 2001; Castro 2001; Surez, 2005 y Pozo et al, 2008).
978-84-695-8363-0
1098
978-84-695-8363-0
1099
Dimensiones transversales
Descripcin
Percepcin
Normativo
Satisfaccin
Organizativo
Propuestas
mejora
mbitos y dimensiones para los GD. Fuente: Pozo, Rodrguez y Gutirrez (2008)
Las preguntas para el debate se definieron atendiendo a estas dimensiones
transversales, facilitando de este modo el desarrollo natural de la conversacin y al mismo
tiempo orientando el pensamiento y la reflexin hacia los temas objeto de estudio. En la tabla
siguiente se muestran, a modo de ejemplo, algunas de las preguntas diseadas para el debate
en funcin de estas dimensiones transversales:
Tabla 1
Preguntas para el debate
Dime nsiones GD
Descripcin
Percepcin
Cmo percibes estas dificultades y puntos fuertes desde el lugar que ocupas en
relacin al Centro?
Satisfaccin
Propuestas de mejora
978-84-695-8363-0
1100
El contacto personal con los participantes, la bsqueda del espacio donde desarrollar
estas entrevistas y la previsin de los recursos necesarios para el registro de la informacin
fueron otras tareas realizadas en esta primera fase.
Fase II: Desarrollo
Asegurar la participacin de todos los miembros del grupo, mantener un ritmo de
debate adecuado, redireccionar el debate hacia el propsito de la investigacin, sintetizar las
distintas aportaciones y avanzar hacia propuestas de mejora, han sido las acciones que han
caracterizado las tareas realizadas por el equipo coordinador de estos grupos.
El debate concluy con la sntesis de las aportaciones ms significativas para el
propsito de la investigacin, con la identificacin de los argumentos enfrentados y la
caracterizacin de las posibilidades de mejora propuestas.
FASE III: Conclusiva
La transcripcin de la informacin registrada, su anlisis e interpretacin han sido las
tres tareas realizadas en esta fase conclusiva.
Para el anlisis de la informacin registrada a travs de los grupos de discusin
desarrollados, hemos seguido el proceso general de anlisis de datos cualitativos propuesto
por Miles y Huberman (2007) as como las indicaciones que sobre este anlisis han dado
autores como Gil et al (1994); Rodrguez Gmez et al (1997) Gutirrez et al (2002) Sandn
(2003), McMillian y Schumacher (2005) o Tjar (2006). En el proceso seguido para el
anlisis de la informacin destacamos tres operaciones: reduccin de datos, disposicin y
transformacin y obtencin y verificacin de conclusiones. El carcter del anlisis
desarrollado ha sido descriptivo en un primer momento, e interpretativo posteriormente.
Una vez trascrito el desarrollo de los grupos de discusin, segn las indicaciones de
Gil et al, (1994:9), la primera tarea realizada fue la lectura de los discursos completos para
tener una impresin adecuada del conjunto, esta lectura nos permiti identificar la
informacin irrelevante (Frey y Fontana, 1991) as como los intervalos donde se concentraban
los debates ms interesantes y surgan las ideas ms relevantes para el estudio. El uso que se
hizo del programa informtico Nudist. Vivo fue muy bsico,
facilitndonos el
almacenamiento, la bsqueda y la recuperacin de informaciones especficas.
La segmentacin, categorizacin y codificacin, procesos bsicos de la reduccin de
datos, se realizaron en paralelo. El criterio usado para la divisin del discurso en unidades de
contenido ha sido el temtico; de esta forma los textos han quedado reducidos en funcin de
los mbitos y las dimensiones transversales de referencia en la elaboracin del protocolo de
los grupos de discusin; estos mbitos han sido las tres macrocategoras de anlisis utilizadas
como base del sistema de categoras elaborado a partir de un proceso deductivo e inductivo.
El cruce de estos mbitos y dimensiones ha dado lugar a cuatro categoras de anlisis dentro
de cada macrocategora.
Las cuestiones de investigacin, la revisin de los avances tericos sobre el tema
objeto de estudio y la experiencia profesional de la investigadora han sido los referentes
utilizados en el establecimiento deductivo de las macrocategoras y categoras de anlisis
978-84-695-8363-0
1101
empleadas. Sin embargo, a lo largo del proceso de anlisis (durante la codificacin) fueron
emergiendo otros aspectos de inters que tras su valoracin fueron incorporados en el
sistema de categoras como subcategoras y unidades de anlisis.
La revisin final del sistema de categoras por un grupo de investigadores,
previamente informados y documentados sobre la investigacin en curso y el propsito de los
grupos de discusin, asegur el carcter objetivo e inteligible que como seala Anguera
(1994) debe caracterizar a cualquier sistema de categoras.
A continuacin se muestra un fragmento del esquema en el que quedan recogidas las
macrocategoras, categoras, subcategoras y unidades que integran el sistema de categoras
utilizado en el anlisis de la informacin textual derivada de los grupos de discusin.
Tabla 2
Sistema de categoras en el anlisis de la informacin textual
MBITO PEDAGGICO
MACRO
CATEGO
RAS
CATEGORAS
SUBCATEGORAS
Relacin educativa
Finalidades educativas
Percepcin mbito pedaggico
(PAP)
Puntos fuertes
UNIDADES DE ANLISIS
Acoger/limitar
Educar/asistir
El lugar de lo educativo
Cumplir con la finalidad
Dar la palabra al nio
Funcin protectora
Normalizacin
La ilusin
El currculum
El trabajo en red de los SS.SS.
Supervisin
Programas
Matrices textuales: a travs de estas tablas de doble entrada, una por cada
macrocategora y de la incorporacin en las celdas de interseccin de las mismas de
una informacin textual, se han podido realizar diferentes anlisis comparando el
tratamiento que una determinada categora ha tenido a lo largo del debate por parte de
los distintos participantes as como la convergencia y la dispersin de sus argumentos.
978-84-695-8363-0
1102
978-84-695-8363-0
1103
intermedios que ofrezcan apoyo institucional a las familias antes de ingresar en un CRAE, as
como sistemas de prevencin.
Se propone elaborar sistemas de evaluacin de programas, reflexin sobre la prctica
educativa, elaboracin de protocolos y estrategas.
Desde el mbito organizativo se proponen la creacin de unos horarios, una estructura,
una programacin que garantice la estabilidad de la vida cotidiana. Debe haber una
organizacin de la vida de los nios que atienda a sus necesidades. (..Dentro de un Centro
haya una programacin, un horario, una estructura porque venga quien venga, se contine
haciendo lo mismo id 147).
Se afirma que para dar un buen servicio socioeducativo, lo ms importante es el
equipo humano. En este sentido, los participantes en los GD sintieron una incapacidad para
encontrar formas de implicacin de los equipos aunque s se aportaron algunas capacidades
que debe tener el educador (formacin inicial, reciclaje, participacin en la gestin del
centro).
Desde el mbito pedaggico se afirma que un CRAE de calidad trabaja a partir del
vnculo educativo basado en la contencin emocional, la afectividad y la vida cotidiana,
elementos que son vehculos para la accin educativa: (trabajar con la palabra del chico,
trabajar con su particularidad es lo ms complejo de la institucin. Lo ms cmodo es
organizarlo todo para que finalmente lo tenga todo. Y no se trata de eso porque que tiene que
poder emerger la palabra del chico id 107).
En definitiva, el trabajo cotidiano de los educadores sociales en los CRAE exige, por
el material sensible con el que trabajan, incorporar la cultura de la calidad como una
exigencia profesional que oriente la praxis profesional, la organizacin y estrategias
pedaggicas de estos centros. La evaluacin participativa, como facilitadora del cambio en la
medida en que promueve estrategias de reflexin que conducen a la mejora, ayudaran a
garantizar que el servicio socioeducativo que se ofrece en dichas instituciones sea de calidad,
lo cual va a repercutir en el bienestar de los nios y de los profesionales.
Referencias
Anguera, M.T, (1994). Mtodos de investigacin en psicologa. Madrid: Sntesis.
Callejo, J. (2001). El Grupo de Discusin: introduccin a una prctica de investigacin.
Barcelona: Ariel.
Castro, J. A. (2001). Metodologa de la investigacin. Fundamentos. Salamanca: Amar.
Frey, J.H. y Fontana, A. (1991). The group interview in social research. The Social Science
Journal, 2S (2), 175-187.
Gil Flores, J. et al, (1994). El anlisis de los datos obtenidos en la investigacin mediante los
grupos de discusin. Enseanza, 8, 183-189.
Krueger, R.A. 1991. El Grupo de Discusin. Gua prctica para la investigacin aplicada.
Madrid: Pirmide.
978-84-695-8363-0
1104
978-84-695-8363-0
1105
Resumen
La enseanza virtual nos ofrece un conjunto de herramientas educativas que facilitan el
proceso de enseanza-aprendizaje, la comunicacin y la cooperacin a travs del uso de las
Tecnologas de la Informacin y la Comunicacin (uso del Aula Virtual y diversos contenidos
digitales). El objetivo del estudio es disear una plataforma virtual adecuada a cada
titulacin y/o materia segn las necesidades y solicitudes expresadas por los propios
alumnos, conociendo el grado de utilizacin de la misma; y conocer los recursos ms
adecuados y ms utilizados en cada una de las ramas participantes en el proyecto. Este
trabajo se centra en el desarrollo de una experiencia interuniversitaria llevada a cabo entre
la Universidad de Almera y la Universidad Politcnica de Cartagena, que a su vez, engloba
distintas ramas del conocimiento (Derecho, Ingeniera y Ciencias de la Salud).
Descriptores: Aula Virtual, tecnologa, interuniversitario.
Abstract
Virtual education offers a set of educational tools that facilitate teaching- learning process,
communication and cooperation through the use of Information and Communication
Technology (use the Virtual Class and some digital content). The objetive of the work is the
design of a virtual platform suitable to each degree and/ or subject with needs and demands
expressed by the students, to know the use of it, and to know the most appropiate resources in
each knowledge involved in the project. This work focuses on the development of an interuniversity experience between University of Almera and Polytechnic University of
Cartagena, with some branches of knowledge (Law, Engineering and Health Sciences).
Keywords: Virtual Class, Technology, Interuniversity.
Introduccin
En la actualidad, el cambio metodolgico que est experimentando la universidad
espaola hace posible una mejor y mayor planificacin, organizacin y puesta en marcha de
metodologas docentes innovadoras que permitirn la construccin de un sistema universitario
ms flexible, accesible y cercano al estudiante y a la sociedad (Gisbert, 1998; Prez, 1997).
978-84-695-8363-0
1106
978-84-695-8363-0
1107
Todas las asignaturas que participaron en el proyecto tuvieron un diseo similar del
Aula Virtual, con iguales apartados para as poder estudiar cules son los ms adecuados para
cada rama del saber. Estos apartados son los siguientes:
- Contenidos de la asignatura: aqu, el profesor colgar los apuntes o reseas de la asignatura
y los alumnos podrn descargar dichos archivos.
- Correo: herramienta necesaria para poderse comunicar el alumno con el profesor, resolucin
de dudas, cuestiones pendientes, etc.
- Foro: creacin por parte del profesor y/o de los propios alumnos para debatir sobre algn
punto concreto de la asignatura.
- Otros recursos: en esta seccin el profesor mostrar enlaces de internet, material adicional,
grabaciones de video, etc., que servir para cumplimentar la materia a impartir.
- Auto-evaluacin: el profesor har una evaluacin virtual (no calificadora) para que el
alumno se auto- evale y sepa si ha adquirido correctamente los conocimientos que se
precisan para superar la asignatura o mdulos de dicha asignatura.
Para un correcto y adecuado seguimiento de las actividades propuestas se realizaron
dos reuniones para consensuar, coordinar y disear las diversas actividades. Tambin durante
el curso acadmico, el coordinador del proyecto supervis el correcto funcionamiento del
mismo, asesorando a alguno de los componentes sobre las actividades propuestas y
evaluacin de las mismas.
En el apartado herramientas de evaluacin tambin se facilit una herramienta de
autoevaluacin a cada uno de los integrantes del grupo de innovacin docente (no slo a los
propios estudiantes) para conocer el proceso de su actividad en el proyecto y verificar si se
haban completado todas las acciones y actividades que deban haber realizado en su
asignatura.
Resultados
El resultado principal fue implantar las acciones que fomenten el uso y manejo
correcto del Aula Virtual en las asignaturas de la Universidad de Almera y de la Universidad
Politcnica de Cartagena, as como promover el diseo personalizado y adecuado a las
necesidades de cada rama del saber.
La muestra sobre la que se ha realizado el trabajo es la siguiente:
-
Hidroterapia: 65 alumnos
Afecciones Mdico- Quirrgicas I: 68 alumnos
Desalacin: 60 alumnos
Abastecimiento de aguas: 45 alumnos
Mecnica de fluidos: 72 alumnos
Derecho Eclesistico del Estado: 88 alumnos
978-84-695-8363-0
1108
la utilidad de las plataformas virtuales. En cuanto al uso de las mismas, los resultados reflejan
la importancia de esta herramienta, ya que todos los encuestados hacen uso del Aula Virtual,
con un 38,5% del alumnado que indic su utilizacin "muy a menudo".
En cuanto al estudio de accesibilidad por parte del alumnado a las diferentes
plataformas virtuales de las asignaturas en el curso 2011-2012, los resultados se incluyen en
el cuadro siguiente. Sealar que las entradas recogidas son totales, pudiendo un mismo
alumno acceder en diferentes ocasiones a un mismo contenido.
Tabla 1
Nmero de accesos a los diferentes apartados recogidos en el esquema genrico de Aula Virtual
propuesto para este trabajo
Hidroterapia
Afecciones
mdicoquirrgicas I
Desalacin
Abastecimiento
de aguas
Mecnica
de fluidos
Derecho
eclesistico del
Estado
Contenido de
la asignatura
185
164
195
125
201
98
Correo
37
40
25
36
33
14
Foro
15
21
11
12
Autoevaluacin
49
47
42
38
51
35
Otros
recursos
23
17
20
25
32
24
Discusin
Tradicionalmente la enseanza a distancia se ha ocupado tanto de favorecer la
construccin de conocimiento mediante la indagacin como de la estimulacin de destrezas y
actitudes relacionadas con el desarrollo profesional y con el desenvolvimiento social.
La evaluacin debe ofrecer criterios coherentes con todos los elementos que
componen el diseo del proyecto, exponiendo a continuacin los que han servido para evaluar
la idoneidad del mismo:
1. Participacin y compenetracin con la propuesta desde la concepcin general del proyecto.
2. Nivel de compromiso de los participantes.
3. Esfuerzo de formacin, capacitacin y actualizacin para la puesta en marcha del proyecto.
4. Ejecucin, seguimiento, autoevaluacin y retroalimentacin de la actividad individual, una
vez que se inicia la puesta en marcha del proyecto.
5. Grado de eficacia de los mecanismos propuestos para retroalimentar el proyecto inicial.
6. Inters y motivacin de los alumnos por el uso de los ordenadores como medio de
aprendizaje.
7. Utilidad del proyecto para el fomento del aprendizaje constructivo, creativo y colaborativo.
8. Favorecer la socializacin, motivacin y vinculacin mediante interacciones en la red.
9. Utilidad de las nuevas tecnologas como instrumentos mediadores en la consecucin de
objetivos curriculares y desarrollo de las competencias bsicas.
10. Adecuacin de los mecanismos de recepcin, formas de intercambio y vinculacin entre
las diferentes experiencias que se vayan gestando.
11. Grado de eficacia de los mecanismos propuestos para retroalimentar el proyecto inicial.
978-84-695-8363-0
1109
Al finalizar, los alumnos han presentado una serie de propuestas que se han remitido a
la coordinadora del proyecto, y sta, a su vez, expuso al resto de integrantes del proyecto en la
reunin que tuvo lugar a principios de junio de 2012 (finalizacin de las clases tericas del
segundo cuatrimestre).
- Continuacin de este proyecto para prximos cursos, contando con la opinin de nuevos
cursos e incorporacin de nuevas materias en el proyecto.
- Posibilidad de dar opcin a los estudiantes de crear ellos una nueva seccin donde su
contenido se tendra que consensuar al inicio del curso, y ver si esta opcin mejora y
contribuye a una mayor adhesin de los mismos a la mejora del Campus Virtual.
- Proponer auto- evaluaciones al finalizar cada bloque temtico, con mayor nmero de
preguntas. No consideracin de la calificacin obtenida por parte del profesor (slo como
orientacin para el alumno). A da de hoy no tiene carcter eliminatorio.
- Ampliar- dividir la seccin de Otros recursos. Para ello se creara un apartado de
audiovisuales, otro de material cientfico y otro divulgativo, pero dentro de la misma seccin.
Los resultados obtenidos han sido completamente satisfactorios. En lneas generales,
las reflexiones sacadas de las encuestas realizadas revelan que tanto los alumnos como
profesores participantes estn plenamente satisfechos y se muestran receptivos a posibles
cambios y adaptaciones que se emprendern en el prximo curso.
Para terminar, se desea enfatizar que el trabajo realizado hasta ahora est corroborando
que las adaptaciones son una herramienta muy adecuada para facilitar a la adaptacin a la
convergencia hacia el Espacio Europeo de Enseanza Superior (EEES) en cualquier
asignatura que lo integre en su docencia, para complementar o sustituir clases presenciales,
supervisar y tutelar la actividad de los alumnos, disponer de nuevos criterios de evaluacin
del trabajo de stos, y aprovechar la interaccin de los alumnos para facilitar las nuevas
labores del profesor.
Referencias
Area, M. y Adell, J. (2009). E-Learning: ensear y aprender en espacios virtuales.
Tecnologa Educativa. La formacin del profesorado en la era de Internet (pp. 391424). Mlaga: Aljibe
Cabero, J. (2000). Nuevas tecnologas aplicadas a la educacin. Sevilla: Didctica y
Organizacin Escolar (DOE).
Gisbert, M. et al. (1998). El docente y los entornos virtuales de enseanza- aprendizaje.
Recursos tecnolgicos para los procesos de enseanza- aprendizaje. Actas del
Congreso Edutec97 (pp. 126- 132). Mlaga: Instituto de Ciencias de la Educacin de
la Universidad de Mlaga.
Ortega Carrillo, J.A. (1999). Comunicacin visual y Tecnologa Educativa. Granada: Grupo
Editorial Universitario.
Prez, C. y Mora, C. (1997). Construccin de Aulas Virtuales como medio de soporte para la
educacin a distancia. Tutorial. La informtica desde la perspectiva de los educadores
(pp. 637-642). Madrid: Universidad Nacional de Educacin a Distancia.
978-84-695-8363-0
1110
Resumen
El proyecto de mentora implementado en la Facultad de Educacin de la Universidad
Complutense de Madrid, en su segunda edicin ha incorporado un seguimiento ms dirigido
y estructurado de las reuniones entre los mentores y los estudiantes. En este sentido, este
curso se ha elaborado un calendario de reuniones orientativo para los mentores y se ha
solicitado, tanto a los mentores como a su grupo de estudiantes participantes que, tras cada
una de las reuniones llevadas a cabo, completaran un pequeo cuestionario de satisfaccin
sobre la misma, de manera que pudiera hacerse una valoracin del beneficio que esta
formacin aporta a la labor orientadora. En esta comunicacin se expone el procedimiento
de reuniones llevado a cabo, los resultados de seguimiento de las mismas, as como la
concordancia entre la autoevaluacin del mentor y la satisfaccin percibida por sus
estudiantes. El anlisis de datos indica una elevada satisfaccin por parte de los estudiantes
y una mayor exigencia con la labor realizada por parte de los mentores.
Descriptores: Mentora entre iguales;
psicopedaggica; formacin mentores.
orientacin
universitaria;
intervencin
Abstract
Mentoring project implemented in the Faculty of Education at the University Complutense of
Madrid, in its second edition has incorporated a more focused and structured follow-up
meetings between mentors and students. In this sense, this course has prepared a schedule of
meetings for mentors and guidance was sought, both mentors and its student participants
after each of the meetings held, complete a short questionnaire to satisfaction about the same,
so that could be an assessment of the benefits that training brings to the work orientation.
This paper sets out the procedure for meetings conducted, the results of their follow-up, as
well as the correlation between self-assessment of the mentor and the satisfaction perceived
by their students. Data analysis indicates high satisfaction of students and a greater demand
with the work of the mentors.
Keywords: Peer mentoring, college counseling, psychoeducational intervention, training
mentors.
978-84-695-8363-0
1111
Introduccin
Durante el presente curso acadmico 2012-2013 se ha llevado a cabo en la Facultad de
Educacin de la Universidad Complutense de Madrid la segunda edicin del programa de
mentora entre compaeros SOU-estuTUtor. El objetivo de esta comunicacin es presentar los
resultados de las reuniones llevadas a cabo por los mentores con sus alumnos mentorizados.
El programa SOU-estuTUtor busca promover la implicacin de la comunidad
educativa de la Facultad de Educacin de la UCM en la tarea de orientar a los estudiantes,
partiendo de sus propias necesidades y demandas, con objeto de optimizar su proceso
formativo en la universidad. Desde el Servicio de Orientacin Universitaria (SOU) se ha
promovido la participacin y colaboracin en la vida universitaria, optimizando los recursos
personales (docentes, estudiantes y colaboradores) de la institucin en torno a un proyecto
comn, concreto y viable, centrado en la mentorizacin entre compaeros de cursos
superiores que tutelan a estudiantes de nuevo ingreso.
Las caractersticas del nuevo EEES y las particularidades de los estudiantes de los
estudiantes de nuevo ingreso (lvarez Prez, 2002; Carpintero, Biencinto, Garca y Nez,
2012; Martnez Serrano, 2009), junto con la elevada ratio profesor/estudiante que tiene la
Facultad de Educacin, que recibe cada ao ms de 1200 nuevos estudiantes, hicieron factible
la idea de implementar un proceso de mentora. Esta accin orientadora permite que los
estudiantes que acceden a la Facultad se incorporen con xito y mayor rapidez a la vida
universitaria. Al mismo tiempo, el grupo de estudiantes mentores desarrolla en actividades
reales, concretas y significativas, competencias esenciales para el futuro ejercicio profesional.
El proyecto comienza en el mes de junio con la seleccin de los estudiantes de cursos
superiores a 2 dispuestos a participar como mentores. Para ello, se disea una convocatoria
pblica y se solicita el expediente acadmico y currculum vitae de todos los candidatos. Tras
la valoracin, se seleccionaron 30 mentores, aunque 1 de ellos no pudo continuar con el
proyecto, por lo que finalmente se cont con 29 mentores, siendo el 70% mujeres y casi el
50% estudiantes de la titulacin de Pedagoga (Grfico 1).
978-84-695-8363-0
1112
Una de las primeras acciones de los mentores, y que permitira darse a conocer a los
estudiantes de primero, fue su participacin en las Jornadas de Acogida que realiza la
Facultad. En dichas jornadas, los mentores, por parejas o grupos de 3 personas, acompaaron
a los estudiantes a sus respectivas aulas y les presentaron las zonas comunes de la Facultad y
les ofrecieron cierta informacin para sobrevivir. Adems, les ofrecieron la oportunidad de
participar en el programa SOU-estuTUtor con la posibilidad de disponer de un mentor que les
facilitara la incorporacin a su vida universitaria. Ms de 100 estudiantes de primero
respondieron afirmativamente a la propuesta y se inscribieron en el proyecto. Una vez
organizados los estudiantes en pequeos grupos para cada mentor (entre 2 y 4 estudiantes por
mentor), intentando ajustar la titulacin y el turno entre los mentores y los estudiantes, son los
mentores quienes deben iniciar y mantener el contacto con sus estudiantes. Para ello, se
consider apropiado realizar, al menos, 5 reuniones de contacto y presenciales mentorestudiantes (ver Tabla 2). Cada reunin contaba con una temtica concreta que el mentor
deba abordar, previamente trabajada y acordada por todo el grupo de mentores. Adems, se
intent acordar fechas aproximadas para celebrar las distintas reuniones de modo que el
desarrollo del proyecto fuera paralelo para todos los mentores. Se consider la finalizacin del
mismo coincidiendo con el inicio del 2 cuatrimestre, dado que se esperaba que los
estudiantes hubieran adquirido en ese momento las herramientas bsicas para seguir creciendo
como universitarios de forma independiente. No obstante, el contacto entre mentores y
estudiantes se ha prolongado a peticin de ambos el tiempo que, en cada caso, se ha
considerado.
Tabla 2
Calendario y temtica de las reuniones de los mentores con los estudiantes
Reunin
R1. Quienes somos
R2. Estudiantes de 1 en la
Facultad de Educacin
R3. Dnde estoy
R4. Facultad como Comunidad
R5. Cmo enfrentar trabajos y
exmenes
R6. Evaluacin y cierre
Temas
Presentacin del proyecto, mentores y estudiantes.
Procedencia y expectativas. Dudas y miedos.
Plan de estudios. Lo que debes saber. Correo
electrnico. Campus virtual
Tutoras y profesores. Departamentos. Decanato.
Servicios administrativos
Acciones de participacin y representacin. Qu
ms me ofrece la Facultad
Tipos de trabajos. Elementos mnimos. Tipos de
exmenes. Cmo estudiar
Valoracin del proyecto. Valoracin de la
experiencia. Aspectos de mejora
Fechas
15-19 octubre
Antes del 31 de
octubre
12-16 noviembre
Antes de Navidad
14-18 enero
4-8 marzo
978-84-695-8363-0
1113
Mtodo
El proyecto se implement a lo largo del primer cuatrimestre del curso acadmico
2012-2013. La recogida de informacin se realiz despus de cada una de las reuniones que
mantuvieron los mentores con sus estudiantes, mediante un cuestionario on-line desarrollado
a travs de la aplicacin informtica Google Drive.
El cuestionario de los estudiantes haca referencia a la satisfaccin con la reunin
realizada, en concreto con respecto a los contenidos, duracin, materiales trabajados y la
satisfaccin general con la misma. Por su parte, los mentores rellenaban un cuestionario de
caractersticas similares donde, adems de indicar el nmero de estudiantes que haban
asistido y la duracin aproximada de la reunin, expresaban el grado de inters de los
estudiantes y su satisfaccin general con la reunin.
Los anlisis estadsticos se han realizado con el paquete SPSS 18.0 y presentan
esencialmente la descripcin de los datos obtenidos.
Muestra
Para el anlisis se ha contado con dos grupos diferenciados de estudiantes que
clasificaremos de aqu en adelante por su pertenencia a una audiencia determinada como
mentorizados (estudiantes de primer curso) y mentores.
El nmero total de estudiantes de primero que se inscribieron en el proyecto fue de
112, de los que el 84% eran mujeres. La media de edad estaba situada en torno a 20 aos.
Distribuidos por titulaciones, puede observarse que los porcentajes principales corresponden a
estudiantes de Educacin Primaria y Educacin Infantil (ver grfico 2).
978-84-695-8363-0
1114
Resultados
Los principales resultados a partir de la informacin obtenida, se pueden estructurar en
funcin de la audiencia implicada: estudiantes y mentores.
Respecto a los primeros, se recoge su opinin de cada una de las seis reuniones
celebradas en torno a 4 elementos: satisfaccin con los contenidos abordados en la sesin,
satisfaccin con los materiales recibidos, satisfaccin con la duracin de la sesin y la
satisfaccin general con la misma. La puntuacin se otorga en una escala Likert de 1-7
puntos, siendo 1 la puntuacin inferior y 7 la superior.
Como puede observarse en el conjunto de grficos siguientes, correspondiente a las
199 respuestas obtenidas de los estudiantes mentorizados (grfico 3), todas las puntuaciones
son muy elevadas, superiores a 6 en todos los casos. Cabe destacar las puntuaciones cercanas
al 7 en la primera reunin realizadas, Quienes somos, sin embargo, dicha puntuacin no es
manifiestamente inferior a lo largo de las distintas reuniones, sino que es mantenida.
R1. Quines somos
0
al
er
en
_g
t is
ion
sa
ac
ur
_d
es
t is
ial
sa
er
at
s
_m ido
t is
n
sa
te
on
_c
t is
sa
al
er
en
_g
n
t is
io
sa
ac
ur
_d
es
ial
t is
sa
er
at
s
_m ido
t is
n
sa
te
on
_c
t is
sa
al
er
en
_g
n
t is
io
sa
ac
ur
_d
les
t is
ia
er
sa
at
_m idos
t is
n
sa
te
on
_c
t is
sa
0
al
er
en
_g
t is
ion
sa
ac
ur
es
_d
ial
t is
er
sa
at
s
_m ido
t is
n
sa
te
on
_c
t is
sa
al
er
en
_g
n
t is
io
sa
ac
ur
es
_d
ial
t is
er
sa
at
s
_m ido
t is
n
sa
te
on
_c
t is
sa
al
er
en
_g
n
t is
io
sa
ac
ur
_d
les
ia
t is
er
sa
at
_m idos
t is
n
sa
te
on
_c
t is
sa
Con respecto a la satisfaccin de los propios mentores con el desarrollo de las sesiones
y respecto a la implicacin percibida en sus estudiantes, puede observarse que sta es muy
elevada en las dos primeras reuniones, con puntuaciones superiores a 5 puntos. En la tercera,
cuarta y quinta reunin la implicacin que los mentores manifiestan sobre sus estudiantes es
ms dispar, obteniendo puntuaciones de 2 y 3 puntos. La ltima sesin presenta una elevada
implicacin por parte de los estudiantes, aunque su presencia es manifiestamente inferior que
al resto de las sesiones (Grfico 4).
978-84-695-8363-0
1115
30
50
40
20
30
20
10
10
0
5
50
40
40
30
30
50
20
20
10
10
0
5
50
40
40
30
30
50
20
20
10
10
0
2
Grfico 4
Respecto a la satisfaccin que los mentores sentan tras haber trabajado y desarrollado
cada una de las sesiones puede observarse que las puntuaciones se sitan entre 3 y 7 puntos.
Segn se van sucediendo las reuniones esta variabilidad disminuye, y la satisfaccin aumenta
en las dos ltimas reuniones. Igualmente, cabe indicar que el nmero de estudiantes
mentorizados que participaron en las ltimas reuniones fue inferior que las primeras.
978-84-695-8363-0
1116
30
40
30
20
20
10
10
0
3
Satisfaccin
Satisfaccin
50
40
50
40
30
30
20
20
10
10
0
3
Satisfaccin
Satisfaccin
50
50
40
30
30
40
20
20
10
10
0
2
Satisfaccin
Satisfaccin
Conclusiones
El desarrollo e implementacin de un proyecto dirigido a estudiantes en su periodo de
transicin a los estudios superiores tiene como objetivo principal mejorar su adaptacin a la
vida universitaria para, indirectamente, lograr un mayor xito en su aprendizaje, satisfaccin
socio-personal y desarrollo profesional.
Las respuestas de los estudiantes de primero, mentorizados en este proyecto,
confirman la consecucin de dicho objetivo; las elevadas puntuaciones referidas tanto a la
satisfaccin general con las reuniones con cada una de las reuniones que realizaron con sus
mentores, como su satisfaccin con respecto al material, contenidos y tiempo dedicado a cada
una de las reuniones, as lo confirman.
978-84-695-8363-0
1117
978-84-695-8363-0
1118
Resumen
En esta comunicacin se presenta un estudio dirigido al anlisis de los factores explicativos
de la presencia cognitiva en estudiantes participantes de una comunidad virtual para la
indagacin y la construccin de artefactos conceptuales. El estudio se apoya en el marco
terico de comunidades de indagacin propuesto por Garrison, Anderson y Archer (2001).
De acuerdo con estos autores, la presencia cognitiva de los estudiantes en dichos entornos
est en funcin de la presencia social, y la presencia docente. En el estudio participaron 49
estudiantes universitarios (20.4% hombres, 79.6% mujeres). El instrumento COI (Shea &
Bidjerano, 2008, adaptado por Gutierrez-Braojos, no publicado) fue aplicado para evaluar
las percepciones de los estudiantes sobre la presencia cognitiva, social y docente. Mediante
la aplicacin de regresiones lineales se explica el peso de cada factor con respecto a la
presencia cognitiva. Al respecto se concluye aportando limitaciones del estudio, as como
sugerencias para facilitar la presencia cognitiva en comunidades virtuales de indagacin.
Descriptores: Presencia cognitiva, presencia social, presencia docente, comunidades,
plataformas virtuales.
Abstract
In this paper we present a study whose goal was analyze predictors of the cognitive presence
in a virtual community for inquiry and knowledge building. The study is based on the
communities of inquiry framework proposed by Garrison, Anderson, and Archer (2001).
According to these authors, the students' cognitive presence depends on social presence, and
teaching presence. Participants in the present study were 100 (79.6 % females, 20.4% males).
CoI Likert-scale inventory was used to obtain data from students Shea & Bidjerano, 2008,
translated and adapted by Gutirrez-Braojos, unpublished). Linear regression analysis was
used in order to analyze predictors of the cognitive presence. The results showed interesting
relationship between variables. We conclude providing limitations of this study, and
suggestions in order to improve the cognitive presence in future inquiry communities.
Keywords: Cognitive presence, social presence, teaching presence, inquiry communities,
virtual environment.
978-84-695-8363-0
1119
Introduccin
Durante la ltima dcada se ha observado un incremento exponencial de estudios
dirigidos a analizar comunidades virtuales de indagacin en contextos educativos (Salmeron,
Rodriguez-Fernndez, & Gutirrez-Braojos, 2010; Scardamalia, & Bereiter, 1994; Snchez
Santamara & Morales Calvo, 2012). Las comunidades virtuales de indagacin hacen
referencia a grupos colaborativos que estn soportados por artefactos tecnolgicos y tienen
como meta compartida la construccin de objetos de conocimiento. Estos entornos
colaborativos virtuales ofrecen posibilidades de expandir el contexto de enseanza y
aprendizaje, ampliar las posibilidades de conectividad entre agentes educativos, y presencia
de los miembros de la comunidad para la construccin de conocimientos (Monereo & Badia,
2008).
En esta lnea Garrison, Anderson, & Archer (2001) han desarrollado un modelo
terico denominado comunidades de indagacin (Community of Inquiry, CoI) en el que
apuntan elementos claves para el xito de la construccin de conocimiento en comunidades
virtuales de indagacin (Figura 1).
Presencia Docente
Interaccin
Social y Docente
Presencia
Presencia Social
Presencia
Cognitiva
978-84-695-8363-0
1120
Hombre
Mujer
Total
Frecuencia
10
39
49
Porcentaje
20.4
79.6
100
Porcentaje
vlido
20.4
79.6
100
Porcentaje
acumulado
20.4
100
978-84-695-8363-0
1121
alfa de
Cronbach
.858
.918
.928
1. Presencia Docente
2. Presencia Social
3. Presencia Cognitiva
temsTotal
n=13
n=9
n=12
Procedimiento analtico
Para dar respuesta a nuestro problema de investigacin se aplic en primer lugar un la
prueba de Pearson con el propsito analizar de modo exploratorio las relaciones lineales entre
las variables. En segundo lugar se aplic una regresin lineal simple, donde se testeo el peso
explicativo sobre la presencia cognitiva de tres variables: la presencia docente, la presencia
social, y la interaccin entre ambas variables pronstico.
Resultados
Para el estudio de las relaciones lineales se ha utilizado la prueba estadstica Pearson.
En lneas generales, los resultados (Tabla 4) muestran relaciones significativas entre todas las
variables. La variable que ms se relaciona con la presencia cognitiva es la variable de
interaccin (presencia docente * presencia social) (r =.670, p < .01), mientras que la presencia
docente es la variable con menos relacin del conjunto de factores pronstico (r =.525, p <
.01). Por lo tanto, todas las variables presentan una relacin significativa, pero es la
interaccin entre la presencia social y cognitiva la variable que se relaciona en mayor medida
con la presencia cognitiva.
Tabla 4
Relaciones entre las variables de estudio: Anlisis de correlacin de Pearson
1.
Variables
Presencia Cognitiva
2.
Presencia Social
3.
Presencia Docente
4.
Presencias Docente*Social
1
1
2
.643**
(.000)
3
.525**
(.000)
.576**
1
4
.670**
(.000)
.954**
(.000)
.794**
(.000)
1
Para estudiar las relaciones explicativas entre las variables de estudio se ha usado la
regresin lineal simple (Tabla 5 & 6). La variable independiente fue una variable resultante de
la interaccin entre ambas. Los resultados de la aplicacin de la regresin mediante el mtodo
introducir indicaron un buen modelo explicativo de la variable presencia cognitiva (Tabla 5).
978-84-695-8363-0
1122
Tabla 5
Evaluacin del modelo explicativo de la presencia cognitiva a partir de la variable
interaccin: presencia social * presencia docente
Modelo 1
R
.670
R2
.449
R2Corregida
.425
F
18.767
p
.000
Durbin-Watson
1.679
.797
(estandarizado)
.685
3.806
.000
978-84-695-8363-0
1123
978-84-695-8363-0
1124
Resumen
Aunque en Espaa, en los ltimos aos, se ha realizado un importante despliegue de
iniciativas legislativas y tcnicas para el abordaje de situaciones de violencia de gnero,
stas han estado centradas en la mujer vctima del maltrato, quedando fuera del foco de
atencin los menores hijos/as de estas mujeres y las posibles repercusiones de la violencia de
gnero en su desarrollo psicosocial. El estudio, parte de una investigacin sobre menores
atendidos junto con sus madres en centros de acogida, analiza las repercusiones de la
exposicin a la violencia de gnero en el ajuste escolar de los menores estudiados. La
muestra ha estado formada por 117 menores de edades comprendidas entre los 3 y los 18
aos y la informacin se ha recogido a partir de un cuestionario cumplimentado por los
educadores de los centros. Los resultados sealan dificultades tanto de rendimiento escolar
como en la adaptacin de los menores a la escuela. Igualmente, se sealan algunas variables
que parecen estar incidiendo especialmente en esta problemtica. De los mismos se infiere la
necesidad de prestar una mayor atencin a las dificultades que presentan estos menores y del
papel del mbito educativo en la deteccin y apoyo de estas dificultades.
Descriptores: violencia de gnero, menores, ajuste escolar.
Abstract
Although Spain has made an important deployment of legislative initiatives and techniques to
approach gender violence in recent years, these ones have been focused on the women as the
victims of abuse, leaving outside the center of attention the children of these women and the
potential impact of gender violence in their psychosocial development. The study, which is
part of a research on children attended with their mothers in shelters, analyzes the impact of
exposure to domestic violence in the school adjustment of the studied children. The sample
consisted of 117 children between 3 and 18 years old and the information has been collected
from a questionnaire completed by the center staff. The results indicate difficulties in both
school performance and the adaptation of children to school. It also identifies some variables
that seem to have an impact on this problem. These outcomes evidence the need to pay
greater attention to the difficulties presented by these children and the role of educational
environment in the support and detection of these difficulties.
Key words: gender violence, children, school adjustment.
978-84-695-8363-0
1125
Introduccin
Aunque en Espaa, en los ltimos aos, se ha realizado un importante despliegue de
iniciativas legislativas y tcnicas para el abordaje de situaciones de violencia de gnero, stas
han estado centradas en la mujer vctima del maltrato, quedando fuera del foco de atencin los
menores hijos/as de estas mujeres y las posibles repercusiones de la violencia de gnero en su
desarrollo psicosocial. Sin embargo, cada vez se oyen ms voces que denuncian que los
menores que viven expuestos a situaciones de violencia de gnero son vctimas a su vez de
esa violencia, tanto si son testigos de la misma como si la sufren directamente. Se trata pues
de una evidente forma de maltrato para los hijos de las vctimas (Seplveda, 2006) de
importantes repercusiones para los menores. De hecho, la literatura sobre el tema coincide en
sealar que la exposicin a la violencia de gnero tiene efectos profundos en el desarrollo de
estos menores (Alcntara, 2010; Bogat, DeJonghe, Levendosky, Davison y von Eye, 2006;
Edleson et al, 2003; Kernic, Wolf, Holt, McKnight, Hueber y Rivara, 2003; Mestre, Tur y
Samper, 2008; Overlien, 2010; Patr y Limiana, 2005) manifestados a travs de problemas
fsicos (retraso en el crecimiento, alteraciones en el sueo y la alimentacin, etc.), alteraciones
emocionales (ansiedad, depresin, baja autoestima, bajo control de los impulsos, etc.),
problemas cognitivos (retraso en el lenguaje, dficit de atencin, etc.) y comportamentales
(agresividad, dependencia, hiperactividad, conductas antisociales o consumo de sustancias).
La manifestacin de estos problemas pueden tener a su vez, como consecuencia
directa, importantes desajustes en el ajuste escolar de estos menores que se traducen en
problemas de rendimiento acadmico, absentismo escolar, falta de motivacin, atencin y
concentracin (Espinosa, 2004). Pocos estudios han examinado el impacto de la violencia
domstica en el funcionamiento intelectual y acadmico de los nios. Sin embargo, en estos
estudios, en general, se encuentran diferencias significativas entre los nios criados en
hogares violentos en comparacin con aquellos nios que fueron criados en hogares no
violentos. Los nios expuestos a la violencia domstica mostraron una disminucin de la
capacidad de concentracin, ms dificultades para completar sus tareas escolares, y
actuaciones significativamente ms bajas en las medidas de las habilidades verbales y motoras
(Fantuzzo y Mohr, 1999; Huth-Boks et al, 2001)). Koenen, Moffitt, Caspi, Taylor y Purcell
(2003) indicaron que los nios expuestos a altos niveles de violencia en el hogar tenan
coeficientes intelectuales ocho puntos de media ms bajos que los nios no expuestos. Por su
parte, Byrne y Taylor (2007) encontraron en los menores expuestos a violencia de gnero
dificultades no slo en sus logros acadmicos sino tambin en su autoestima y en el
establecimiento de relaciones sociales.
El objetivo de este trabajo es evaluar el grado de ajuste escolar de una muestra de
menores que se encuentran acogidos en centros junto con sus madres como consecuencia de
haber sufrido situaciones de violencia de gnero. Los datos forman parte de un estudio ms
amplio sobre el desarrollo psicosocial de estos menores y su posible relacin con la
exposicin a la violencia de gnero.
Mtodo
Participantes
Se ha estudiado la situacin de 117 menores acogidos en los cetros de acogida a
mujeres vctimas de violencia de gnero. De ellos, el 48.7% son mujeres y el 51.3% varones,
con edades comprendidas entre 3 y 18 aos, observndose con ms frecuencia el rango de
978-84-695-8363-0
1126
87%
testigos
no consta
978-84-695-8363-0
1127
40
40
25,5
30
20
10
0,9
0
violencia psicolgica
violencia fsica
abuso sexual
Para evaluar el grado de ajuste escolar de los menores se evaluaron tanto los logros
acadmicos como la adaptacin de los menores al entorno escolar, incidiendo adems en
diferentes aspectos de su comportamiento en la escuela.
En general, los menores presentan un adecuado nivel de ajuste escolar, en concreto
un 5,4% de los menores presentaban un grado negativo de integracin escolar, el 54,1% se
encontraban en un nivel moderado y el resto, el 40,5% presentaban un grado positivo de
integracin escolar (Grfico 3).
3. Nivel de ajuste escolar
54,1
60
40,5
40
20
5,4
0
negativo
moderado
positivo
978-84-695-8363-0
1128
Tabla 1
Rendimiento acadmico y adaptacin escolar
Bajo
Medio
Alto
Total
Mala
Regular
Buena
Total
Nivel de rendimiento
N
%
32
39,0
37
45,1
13
15,9
82
100,0
Nivel de adaptacin escolar
2
2,4
29
35,4
51
62,2
82
100,0
Nunca
Pocas
veces
Bastantes
veces
Muchas
veces
Siempre
24,7
35,1
27,3
13
28,6
55,8
11,7
3,9
44,7
50
3,9
1,3
1,3
32
38,7
18,7
9,3
53,8
32,5
7,5
1,3
978-84-695-8363-0
1129
978-84-695-8363-0
1130
Referencias
Alcntara, M.V. (2010). Vctimas invisibles: los hijos de las mujeres vctimas de la violencia
de gnero. Tesis doctoral Universidad de Murcia.
Byrne, D. y Taylor, B. (2007). Children at Risk from Domestic Violence and their
Educational Attainment: Perspectives of Education Welfare Officers, Social Workers
and Teachers. Child Care in Practice, 13 (3).
Espinosa, MA. (2004). Las hijas e hijos de mujeres maltratadas: consecuencias para su
desarrollo e integracin escolar. Instituto Vasco de la Mujer.
Huth-Bocks, A., Levendosky, A. y Semel, M. (2001). The direct and indirect effects of
domestic violence on young childrens intellectual functioning. Journal of family
violence, 16(3), 269-290.
Koenen, K.C., Moffitt, T.E., Caspi, A., Taylor, A., y Purcell, S. (2003). Domestic violence is
associated with environmental suppression f IQ in young children. Development and
psychopatology, 15(2), 297-311.
Mathias, J. L., Mertin, P., and Murray,A. (1995). The psychological functioning of children
from backgrounds of domestic violence. Australian Psychologist, 30(1), 47-56.
Mestre, M.V.; Tur, A.M. y Samper, P. (2008). Impacto psicosocial de la violencia de gnero
en las mujeres y sus hijos e hijas. Un estudio emprico en la comunidad valenciana.
Valencia: Fundacin de la Comunidad Valenciana frente a la discriminacin y malos
tratos Tolerancia Cero.
Overlien, C. (2010). Children exposed to domestic violence. Conclusions from the literature
and challenges ahead. Journal of social work, 10(1), 80-97.
Patr R. y Limiana R. (2005). Vctimas de violencia familiar: Consecuencias psicolgicas en
hijos de mujeres maltratadas. Anales de psicologa, 21(1), 11-17.
Prez, C.M., y Widom, C. S. (1994). Childhood Victimization and Long-Term Intellectual
and Academic Outcomes. Child Abuse and Neglect, 18, 617633.
Seplveda, A. (2006). La Violencia de Gnero como causa de Maltrato Infantil. Cuadernos de
medicina forense, 12(43-44):149-164.
Westra, B., and Martin, H. P. (1981). Children of battered women. Maternal-Child Nursing
Journal, 10, 41-54.
Ybarra, G., Wilkens, S. y Lieberman, A. (2007). The influence of domestic violence on
preschooler behavior and functioning. Journal of Family Violence 22(1), 33-42.
978-84-695-8363-0
1131
Resumen
Si bien la calidad de la educacin es uno de los principales temas de toda agenda
gubernamental, no existe un conceso sobre su definicin y medicin. Tras una revisin de
diferentes definiciones, el presente documento propone una metodologa de clculo de un
ndice compuesto para medir la calidad de la educacin bsica y media en Colombia. Este
ndice resume la informacin de diferentes variables relacionadas con los insumos, la gestin
y los resultados del sistema educativo, haciendo uso de la tcnica de Anlisis de
Componentes Principales. Los principales resultados indican que hay una alta concentracin
de regiones del pas con un bajo ndice de Calidad de la Educacin y que los esfuerzos para
lograr mejoras deben enfocarse principalmente en los indicadores de gestin educativa,
especficamente en las variables relacionadas con la matrcula.
Descriptores: ndice; calidad; educacin; componentes principales.
Abstract
Is well-known that the quality of education is one of the main points of each government
agenda, but there is no consensus on its definition and measurement. After a review of
different definitions, this paper proposes a methodology for calculating a composite index to
measure the quality of elementary and secondary education in Colombia. This index
summarizes the different variables related to inputs, management and outcomes of the
educational system, using the technique of principal component analysis. The main results
indicate that there is a high concentration of regions with low Index of Quality of Education
and in this way efforts for improve it should focus primarily on educational management
indicators, specifically the variables related to enrollment.
Keywords: Index; quality; education; principal components.
Introduccin
El fomento de la educacin en una nacin es uno de los objetivos ms importantes de
todo gobierno. Al respecto, organismos como las Naciones Unidades han declarado que la
educacin primaria debe ser gratuita y obligatoria para los nios de todas las naciones
(UNESCO, 2005a). Adicionalmente, han sealado que la calidad constituye la mdula de la
educacin y es un factor determinante para mejorar la escolarizacin, la retencin y el
aprovechamiento escolar (UNESCO, 2005b).
978-84-695-8363-0
1132
978-84-695-8363-0
1133
978-84-695-8363-0
1134
978-84-695-8363-0
1135
Tabla 12
Variables que comprende el grupo Institucional
Subgr up os
Varia bl e
Cap acid ad Po rcen ta je d e Est udia ntes en in st ituci ones ofi cia les
in sti tuci onal Po rcen ta je d e Est udia ntes en in st ituci ones no of icia les
Po rcen ta je d e Sed es o fi ci ales
Fuent e
M EN
M EN
M EN
DANE
DANE
978-84-695-8363-0
1136
Tabla 13
Variables que comprende el grupo Gestin
Subgr upos
Subgrupos
Variable
Porcentaje de la matrcula of icial
Fuente
MEN
Variable
Por centaje de la Doce normal
mat rcula
Trece normal
especi al
Ciclo 1 adultos
Ciclo 2 adultos
Ciclo 3 adultos
Ciclo 4 adultos
Ciclo 5 adultos
Ciclo 6 adultos
Aceleracin del aprendizaje
TCB t ransici n
TCB primari a
TCB secundaria
TCB media
TCN t ransicin
TCN primari a
MEN
Indgenas
Desplazados
MEN
Discapaci dad
Razn
Est udi ante por
profesor
TCN secundaria
TCN media
Fuente
MEN
Porcentaje de la Transici n
mat rcula por Pre j ardn
grado
Jardn
Primero
Segundo
Tercero
Cuar to
Quinto
MEN
Sexto
Spti mo
Octavo
Noveno
Dcimo
Once
978-84-695-8363-0
1137
Tabla 14
Variables que comprende el grupo Resultados
Subgrupos
Tasas de efi ci encia Reprobados
Variable
Aprobados
Desertores
Fuente
MEN
Tasa repitencia
Tasa asistencia
Resultados Icfes
Bi ol oga
Matemti cas
Fil osofa
Fsica
Hi storia
ICFES
Qumi ca
Lenguaj e
Geografa
Ingl s
Resultados Saber
Matemti cas 5
Lenguaj e 5
ICFES
Matemti cas 9
Lenguaj e 9
Porcentaje de
colegi os segn
categra de
resultados
Muy inferior
Inferior
Bajo
Al to
ICFES
Superi or
Muy superior
Escolarizacin
DANE -MEN
45
978-84-695-8363-0
1138
Rodrguez, A. (2011). La imprevisibilidad de las crisis: un anlisis emprico sobre los ndices de riesgo pas
(Vol. 21). Colombia: Revista Innovar.; Anzai, Y., Minoshima, S., Wolf, G., & Wahl, R. (1999). Head and neck
cancer: Detection of recurrence with three-dimensional Principal Components Analysis at dynamic FDG PET
(Vol. 212): Radiology.; Lozano, J., Madero, E., Herrera, ., Tafur, H., & mezquita, E. (2005). Puesta a prueba
de un indicador sencillo de degradacin en suelos histerticos del Valle del Cauca (Vol. 54): Revista Acta
Agronmica. Universidad Nacional de Colombia.).
978-84-695-8363-0
1139
Tabla 15
Informacin complementaria ICE
Regi n
2005
2009
Bogot D.C
0,690
0,668
San Andrs
0,126
0,107
978-84-695-8363-0
1140
Ilustracin 8. Porcentaje de la poblacin con NBI en 2005 y NBI y capacidad institucional en 2009
Fuente: Tomado de DNP (2011)
978-84-695-8363-0
1141
978-84-695-8363-0
1142
978-84-695-8363-0
1143
Resumen
Introduccin
Este trabajo presenta un panorama actual sobre los distintos enfoques de liderazgo en
educacin, siendo un concepto complejo y extenso en investigacin como en su prctica
educativa. Estudiar el liderazgo a nivel de organizacin escolar, es una tarea ardua ya que
intervienen distintos agentes educativos, que desarrollan funciones muy dispares unos de
978-84-695-8363-0
1144
978-84-695-8363-0
1145
2.
3.
4.
En este enfoque, el lder es corresponsable con otros lderes del desarrollo y mejora de
los centros escolares pertenecientes a una misma rea geogrfica. Es lo que se denomina
como liderazgo del sistema. Por otro lado, al ejercer un liderazgo relacionado con otros
centros escolares, adquiere la caracterstica de liderazgo comunitario. Hopkins (2009, p.9)
define: el liderazgo del sistema: como un lder escolar que desea y es capaz de
responsabilizarse de funciones que van mas all del sistema educativo, a la vez que se implica
en conseguir el xito de los alumnos de otros centros as como el de sus propios alumnos.
Las caractersticas de este tipo de liderazgo, segn el autor son:
Trabajan de forma colegiada con otros centros para reducir las distancias entre
ellos.
El sistema educativo, la escuela y el aula son factores que influyen entre s, de tal
manera que para realizar cambios educativos, debe tenerse en cuenta estos
espacios considerados como conductores claves de la reforma educativa.
Esta forma de dirigir centros escolares puede considerarse holstica al romper los lmites
tradicionales de organizacin educativa, y considerando a los estudiantes de otros centros
como un conjunto ntegro de una comunidad. Desde las comunidades, los distintos lderes de
los centros, ponen en marcha trabajos de colaboracin dinmicos, donde surgen los sistemas
de relaciones en red. La finalidad de esta forma de trabajo est en mejorar los rendimientos
acadmicos as como conseguir nuevas formas de sistemas educativos. A su vez, la
comunidad es concebida como una prctica ejercida por un grupo de personas que comparten
informacin, ideas y experiencias apoyndose en aspectos como:
978-84-695-8363-0
1146
Proceso dinmico que abarca la adaptacin positiva dentro del contexto de una
adversidad significativa (Lutharet al., 2000)
Si se interpreta la resiliencia desde el liderazgo, sta permite entender mejor los avances
de la sociedad, los cambios polticos y las nuevas demandas culturales. En ocasiones, frente a
estos factores, los directores escolares no saben responder a esta realidad provocando en ellos
situaciones de estrs que repercuten en las organizaciones educativas. Por tanto, si se quiere
desarrollar un liderazgo resiliente desde las direcciones, es preciso que el director domine
unas competencias profesionales, acorde a las caractersticas de resiliencia, a la vez que
conozca sus fortalezas y debilidades. Tambin, el centro escolar debe ser consciente de cuales
978-84-695-8363-0
1147
son sus debilidades y fortalezas, para que en momentos adversos stas sean puestas en
prctica y transformen los riesgos en oportunidades, para el bien de toda una comunidad
escolar. Nelson et Nelson (2009) exponen que un centro educativo es resiliente si tiene la
capacidad de ejercer un liderazgo que consiga sus objetivos a pesar de las adversidades.
Considerando, que las adversidades no se solventan en el momento preciso sino que stas
deben ser derrotadas con actitudes proactivas. Por otro lado, un liderazgo resiliente debe tener
en cuenta, el contexto que envuelve al centro escolar, influyendo en l de manera directa e
indirecta. Las relaciones entre el centro y su contexto pueden crearse con la puesta en prctica
de una justicia social
Los directores escolares que desarrollan un liderazgo resiliente, son aquellos capaces de
ser catalizadores que inspiran a otros a que tengan actitudes resilientes, frente a situaciones
adversas. Para crear una cultura resiliente en los centros escolares es necesario ver las
adversidades como oportunidades, teniendo como referente a un lder resiliente que genere
puntos de inflexin en las personas que cambian una cultura (Gladwell, 2000). En
definitiva, la resiliencia no es una tcnica nueva de intervencin, a pesar de ser un concepto
emergente para liderar centros educativos. Hoy en da, el lder escolar requiere nuevas
capacidades, que sin desmerecer ninguna de las estudiadas en los otros liderazgos, definen su
resiliencia; enfrentamiento a la adversidad, capacidad de superacin, altos niveles de
autoconfianza, perseverancia, orientacin al logro y flexibilidad (Gonzlez, 2010).
Liderazgo distribuido
Este modelo de liderazgo es emergente para la cultura educativa, abarcando niveles de
primaria, secundaria y superior. Puede apreciarse que en investigaciones de EE.UU muestran
ejemplos empricos sobre liderazgo distribuido en educacin primaria y secundaria,
(Leithwood, 2009; Spillane et al., 2011; Spillane, 2012). Este liderazgo, abarca tanto a
docentes como directores a la vez que influye en las funciones administrativas que desempea
la escuela as como toda una comunidad escolar. Por otro lado, y desde una perspectiva
britnica, los estudios sobre liderazgo distribuido se han centrado en conceptualizaciones
tericas en los distintos niveles educativos (Bolden, 2011; Harris, 2009, 2010). A su vez,
estos estudios, aportan que el liderazgo distribuido se compone de cinco dimensiones
escolares: contexto, cultura, cambio, relaciones y actividad. Sin embargo, en Australia, este
liderazgo ha sido explorado en niveles de secundaria y superior (Gronn 2002, 2009; Gronn y
Hamilton, 2004; Dinham, 2010; Dinham et al., 2011; Sloan, 2013). Si arrancamos desde las
primeras investigaciones realizadas, cabe destacar a Gronn (2002), donde describe el
liderazgo distribuido como nuevas formas de hacer para las direcciones escolares,
interaccionando rasgos y comportamientos del director con la estructura y sistema de la
organizacin escolar.
Por tanto, liderazgo distribuido puede considerarse como una forma de liderar
colegiadamente, sustentado por una filosofa colectiva. ste se aleja de las teoras
tradicionales de liderazgo, centradas en habilidades, rasgos y comportamientos de los lderes.
En definitiva, la puesta en prctica de liderazgo distribuido en los centros educativos genera
una mayor autonoma para el propio centro, intercalada en los distintos niveles escolares. Los
agentes escolares juegan un papel importante para el funcionamiento organizativo, utilizando
el trabajo colegiado como un factor enriquecedor para la evolucin del centro.
978-84-695-8363-0
1148
978-84-695-8363-0
1149
Referencias
Ainscow, M., Booth, T. y Dyson, A. (2006). Improving schools, developing inclusion. New
York: Routledge.
Aubrey, C., Godfrey, R., y Harris, A. (2013). How do they manage? An investigation of early
childhood leadership. Educational Management Administration & Leadership, 41(1), 529.
Bolden, R. (2011). Distributed leadership in organizations: A review of theory and research.
International Journal of Management Reviews, 13(3), 251-269.
Bowlby, J. (1985). La separacin afectiva. Barcelona: Paids
Burrello, L., Lashley, C. y Beatty, E. (2001). Educating all students together: How school
leaders create unified systems. Thousand Oaks, CA: Corwin Press.
Campo, A. y Fernndez, A. (2009). El papel del liderazgo en las redes de aprendizaje.
Organizacin y gestin educativa, 6.
Delgado, M. (2011). Organizacin y gestin de centros y contextos educativos. Madrid:
Universitas.
Dinham, S. (2010). Teachers make a difference. Teacher:The National Education Magazine,
June/July, 12-14. Availability:
<http://search.informit.com.au/documentSummary;dn=131232998185523;res=IELHSS>
Dinham, S., Anderson, M., Caldwell, B., & Weldon, P. (2011). Breakthroughs in school
leadership development in Australia. School Leadership & Management, 31(2), 139154.
Dyson, A. y Millward A. (2000). Schools and special needs: Issues of innovation and
inclusion. London: Paul Chapman
Fullan, M. (2006). Turnaround leadership. San Francisco: Jossey-Bass.
Gladwell, M. (2000). The tipping point: How little things can make a big difference. London:
Abacus.
Gonzlez, M T. (2008). Diversidad e inclusin educativa: algunas reflexiones sobre el
liderazgo en el centro escolar. REICE - Revista Electrnica Iberoamericana sobre
Calidad Eficacia y Cambio en Educacin, 6(2), 82-99.
Gonzlez, R. (2010). Liderazgo resiliente: un nuevo paradigma en el perfil del lder. Capital
Humano, 240, 28-30.
Gronn, P. (2002) Distributed Leadership. In K. Leithwood, P. Hallinger, K. Seashore-Louis,
G. Furman-Brown, P. Gronn, W. Mulford & K. Riley (Eds.), Second International
Handbook of Educational Leadership and Administration. Dordrecht: Kluwer.
978-84-695-8363-0
1150
978-84-695-8363-0
1151
Luthar, S., Cicchetti, D. y Becker, B. (2000). The construct of resilience. A critical evaluation
and guidelines for future work. Child Development, 71, 543-562.
Manciaux, M. (2003). La resiliencia: resistir y rehacerse. Barcelona: Gedisa.
Muijs, D., Ainscow, M., Dyson, A., Raffo, C., Goldrick, S., Kerr, K., Lennie, C. y Miles, S.
(2007). Every child matters. Leading under pressure: Leadership for social inclusion.
Nottingham: National College for School Leadership (NCSL).
Murillo, J. (2006). Una direccin escolar para el cambio: del liderazgo transformacional al
liderazgo distribuido. Revista Iberoamericana sobre Calidad, Eficacia y Cambio en
Educacin, 4, 11-24.
Murillo, J. (2012). Problemas docentes para sociedades en crisis. Crtica, 982,19-23.
Murillo, J. y Hernndez-Castilla, R. (2011). Hacia un concepto de justicia social. Revista
Iberoamericana sobre Calidad, Eficacia y Cambio en Educacin, 9(4), 7-23.
Murillo, J., Krichesky, G., Castro, A. y Hernndez-Castilla, R. (2010). Liderazgo escolar para
la inclusin y la justicia social. Revista Latinoamericana de Educacin Inclusiva, 4(1),
169-186.
Nelson, J. y Nelson, L. (2009). Building resilient communities: One organization at a
time.The International Consortium for Organizational Resilience.
Sloan, T. (2013). Distributed leadership and organizational change: Implementation of a
teaching performance measure. The New Educator, 9(1), 29-53.
Spillane, J. (2012). Distributed leadership. San Francisco, CA: Jossey-Bass.
Spillane, J., Healey, K., Parise, L., y Kenney, A. (2011). A distributed perspective on learning
leadership. Leadership and learning, 159.
Vilar, J. (2009). Crear en la esfera local un mundo ms humanizado y acogedor. El trabajo en
red y la accin comunitaria. Escuela, 2.
Villalobos, E. y Casteln, E. (2011). La resiliencia en la educacin. Paedagogium.
Universidad Panamericana.
978-84-695-8363-0
1152
Resumen
La presente propuesta explora, describe y explica la importancia de incorporar estrategias
alternativas de evaluacin diseadas para los alumnos con discapacidad en las aulas de
integracin. Con un diseo de cuasiexperimentacin con manipulacin de variables en los
que se busc, entre otras, respuesta a la pregunta Cmo evaluar al colectivo de estudiantes
con Necesidades Educativas Especficas (NEE) que se enfrentan al sistema educativo espaol
convencional?; Se describe una serie de tareas dirigidas a la evaluacin alternativa de
asignaturas como lengua y matemticas, para estudiantes de primaria con NEE, usando
como base de referencia evaluativa las competencias curriculares establecidas para cada
grado. Es altamente conveniente que el ambiente escolar otorgue flexibilidad y apoye el
funcionamiento individual para potenciar al mximo las capacidades ejecutivas de los
escolares, minimizando los problemas asociados con el rendimiento acadmico. Los
resultados indican que la variedad y riqueza de los instrumentos de evaluacin, as como su
funcionalidad; permiten que la aplicacin de un sistema de evaluacin alternativo para este
colectivo sea menos punitivo y como consecuencia ms eficaz.
Descriptores: Evaluacin Escolar, Discapacidad, Aulas de Integracin.
Abstract
This proposal explores, describes and explains the importance of incorporating alternative
assessment strategies designed for students with disabilities in inclusive classrooms. The
research searched among others, answer to the question How to evaluate the group of
students with disabilities in the conventional Spanish education system?; Describe a series
task aimed at evaluating alternative subjects as language and math for elementary students
with disabilities. Using as a baseline established evaluative skills curriculum for each grade.
It is highly desirable that the school environment allowing flexibility and support individual
performance to maximize the capabilities of the school executive, minimizing the problems
associated with academic performance. The results indicate that the variety of the assessment
tools and their functionality, allow the implementation of an alternative assessment for this
group is less punitive and more effective as a result.
Keywords: School assessments, Disability, Integration Classrooms.
978-84-695-8363-0
1153
Introduccin
La legislacin espaola dicta que los nios/as con necesidades educativas especficas
sean incluidos en el sistema educativo, (educacin para todos, Ley Orgnica de Educacin
2/2006, LOE) minimizando el trato excluyente y discriminatorio y en aras de brindar a todos
igualdad de oportunidades y derechos. No obstante, el Estado an no ha establecido el modo
sistemtico en que este colectivo debe ser evaluado mientras realiza sus estudios en aulas de
inclusin y generalmente la responsabilidad de la evaluacin del progreso acadmico recae
sobre los profesionales de apoyo docente y no sobre los maestros tutores del nio /a.
Adems, la evaluacin est llamada a trascender los viejos conceptos que la ubicaban
como un acto punitivo de medicin y debe necesariamente convertirse en un proceso que
certifique el aprendizaje del individuo independientemente de su nivel intelectual. En este
orden de ideas, la evaluacin debe comprender todas aquellas actividades realizadas por los
docentes y que le aportan informacin que pueda ser utilizada como retro-alimentacin, para
modificar o mantener la planificacin del proceso de enseanza. Siendo as, la evaluacin se
convierte realmente en formativa pues la evidencia es actualizada permanentemente y
utilizada para ajustarse a las necesidades del estudiante. Hasta ahora: nada nuevo son
muchos los autores que han escrito sobre el tema. No obstante, se sigue evaluando
generalmente del mismo modo, con una marcada tendencia a pensar que lo formativo de la
evaluacin es ms carga de trabajo docente, con lo que coincide Wang (1994), cuando apunta
que el proceso de evaluacin individualizado y adaptado a la necesidad del estudiante, se ha
hecho difcil por la falta de un apoyo sistemtico (p. 72)
La investigacin nace de la necesidad de desarrollar un programa alternativo de
intervencin enfocado en la evaluacin escolar de los nios/as con discapacidad en aulas de
inclusin que vaya de la mano con los objetivos curriculares y que compruebe el aprendizaje
estudiantil de este colectivo desde diferentes perspectivas y con variados recursos. Destinado
a favorecer la inclusin y que reduzca los obstculos, promoviendo la toma de conciencia
sobre los procesos claves de la evaluacin inclusiva, valorando la interaccin docente-alumno
y la comunicacin alternativa (Farmer, Towels, Kleinert, OReagan y Kleine; 2001; Watkins;
2007). Surge la pregunta de cmo evaluar al colectivo de estudiantes con NEE que se
enfrentan al sistema educativo convencional?, pues coincidiendo con mltiples
investigaciones sobre la materia, los mtodos tradicionales no son suficientes para brindar
informacin veraz sobre el desempeo acadmico de los estudiantes con discapacidad, (Black
y Wiliam, 2010; Lynn, Fuchs, Karns, Hamllet, Katzaroff, Dutka, 1997 y Torres, 2005). Una
propuesta de evaluacin alternativa que vaya de la mano con la comunicacin adecuada entre
lo que el estudiante conoce y lo que el docente espera, necesariamente implica la
conformacin de una variada coleccin de informaciones que evidencien tal aprendizaje.
En este sentido y conforme expone S-Chaves (2000) esta coleccin de evidencias
constituye un instrumento para la construccin del conocimiento en el proceso de enseanzaaprendizaje (E-A), implica una manera de diagnosticar, evaluar y acompaar el trabajo de
aula. La adecuada recopilacin de informacin (evaluacin) en diferentes momentos del
proceso de E-A que d relevancia al proceso de adquisicin y desarrollo de habilidades,
destrezas y valores, permite verificar dificultades y aplicar correctivos durante el proceso, en
virtud del carcter longitudinal y comprensivo de la recopilacin. Adems, mucho se ha
investigado acerca de la implicacin entre la recopilacin sistematizada de evidencias de
aprendizaje y la construccin de autoconocimiento y metacognicin, los hallazgos de Hilda,
1996; Klenowisk, 2003; Mellado, 2005; Rezende, 2010 y Roca, 2012, sustentan la relevancia
978-84-695-8363-0
1154
L.I./ 28-10-2004
de
Gnero
M
Diagnstico de NEE
Escolaridad
Actual
retraso 2do grado
Discapacidad por
madurativo.
Trastorno especfico del
lenguaje
Hiperactivo en casa
Pluridiscapacidad:
visual
con deficiencias asociadas
psquicas
2do grado
Grupo
Control
Control
I.N./01-01-2003
J.J./ 09-11-2004
J.C./ 23-04-2003
M
F
C.L./ 25-11-2004
R.S/ 06-07-2005
N.L/25-04-2005
A.L./ 01-01-2002
M
F
M
A.D./ 09-05-2002
978-84-695-8363-0
Trastorno generalizado
del desarrollo
Psquico leve
Psquica leve con trastorno
grave de la comunicacin.
Disfasia
Pluridiscapacidad
Parlisis
cerebral.
Hemiplejia
TDHA
Implante coclear
Implante coclear. Psquico
leve
Sndrome Down moderado
Retraso en el lenguaje
1155
3er grado
Control
4to grado
4to. grado
Control
Control
2do grado
Experim
2do grado
2do grado
4to grado
Experim
Experim
Experim
4to grado
Experim
Procedimiento
El estudio se ha estructurado en tres fases: preparatoria, aplicacin y de evaluacin.
En la Fase preparatoria, o de planificacin inicial se estableci vnculo con los colegios
que atienden nios con discapacidad en el Principado de Asturias y se seleccion una primera
muestra. Se inform a todas las partes involucradas en el proceso acerca de la investigacin,
se realizaron entrevistas semi-estructuradas y observaciones a todos los participantes. Se
comenz la elaboracin de fichas sistematizadas de las evidencias de evaluacin alternativa y
el material concreto para las asignaturas de lengua y matemticas, conforme se establece en el
currculum vigente para cada grado, teniendo en consideracin las caractersticas individuales
de cada muestra.
En la fase de aplicacin, se hizo la prueba de conocimiento general para lengua y
matemticas, se completaron los instrumentos de evaluacin alternativa involucrando a
profesores, tutores, orientadores de centro y profesores especialistas. En la ltima fase, se
evala la coleccin de evidencias para cada nio con miras a calcular el tamao del efecto de
los grupos de estudio y obtener los resultados, que permitan elaborar las conclusiones finales.
Resultados esperados
Se espera que los resultados post-test obtenidos permitan establecer diferencias entre
ambos grupos, arrojando una mejora significativa en las evaluaciones finales del grupo
experimental con respecto al control. Actualmente, los resultados parciales muestran una
importante mejora inter-sujeto en el grupo experimental con respecto al grupo control. En las
pruebas realizadas hasta la fecha, los sujetos del grupo experimental que estn siendo
expuestos a evaluacin constante con el mtodo alternativo, han demostrado mejor dominio
de los contenidos curriculares y han requerido menos repaso de los contenidos dados antes de
una evaluacin. Lo que nos hace inferir que el modo (mtodo de evaluacin alternativo) en
que se accede a la informacin almacenada es eficiente y el sujeto es capaz de ofrecer
respuestas esperadas e incluso nos hace pensar que el aprendizaje con el mtodo alternativo
pudiera estar siendo significativo. En este sentido, no queremos arrojar resultados definitivos,
a un mes de finalizar las mediciones y con los exmenes finales que se aplicarn en junio, tras
lo cual se espera hacer las comparaciones definitivas y los anlisis de varianzas y covarianzas,
tamao del efecto de ambos grupos. Hasta ahora los resultados son parciales, no obstante,
insistimos en que ya hay tendencias diferenciadas en los resultados a favor de mejor
978-84-695-8363-0
1156
desempeo general del grupo experimental con respecto a sus pares del grupo control, no slo
a nivel cuantitativo de rendimiento acadmico, sino a raz de las opiniones obtenidas de las
entrevistas aplicadas a los docentes, coordinadores de seccin y maestros especialistas
involucrados con los sujetos de la muestra. Todos los sujetos del grupo experimental han
mostrado una mejora en las calificaciones, llegando algunos de ellos a obtener calificaciones
notables en matemticas y lengua. El grupo control se ha mantenido ms estable y no se
aprecian (hasta la fecha) diferencias significativas intrasujeto.
Adicionalmente, se espera que con la aplicacin del sistema alternativo de evaluacin
se minimicen los obstculos a los que se enfrentan cotidianamente nios/as y personal
docente al momento de valorar los aprendizajes, as como mejorar la interaccin natural de los
nios/as y sus docentes, al crear un clima de enseanza-aprendizaje ms natural y distendido,
que favorezca la inclusin acadmica de los nios con NEE.
Discusin e implicaciones
Lo que aprende el estudiante es el resultado de una secuencia particular de eventos
instruccionales que son casi imposibles de predecir, aunque se haya planificado
detalladamente y a conciencia el proceso de enseanza. Si a esto le sumamos que en una clase
regular el docente se enfrenta cada da a un grupo de personas con capacidades cognitivas
diferentes y necesidades especficas de atencin, la situacin claramente se complica. La
evaluacin eficaz de los aprendizajes debe ser el proceso central del proceso de enseanza,
que permite verificar, corregir y profundizar para favorecer en todo momento el dominio de
los contenidos curriculares que se espera para cada estudiante, lo cual lo convierte en el
recurso ms valioso para conocer cmo se est desarrollando el proceso de aprendizaje. Ante
esto, la evaluacin est llamada a trascender los viejos conceptos que la ubicaban como un
acto puramente de medicin para convertirse en un proceso que certifica el aprendizaje del
individuo independientemente de su capacidad cognitiva, con lo cual, en la medida que ese
proceso de certificacin sea continuo, natural, atractivo, adaptado a las necesidades del
estudiante y hasta divertido, ser ms efectivo y desde luego nos mostrar resultados ms
cercanos a la realidad.
Por otra parte, mucho se hace a nivel individual en los diferentes centros de enseanza
para intentar acercarse al objetivo real del proceso evaluativo, no obstante mucho de ese
esfuerzo se pierde al no estar debidamente sistematizado, por lo que convendra crear una
plataforma destinada a recopilar experiencias y materiales diseados para cada etapa, con
cada tipo de necesidad, de modo que se pueda acceder a la informacin de manera rpida,
eficaz y confiable. Lo cual contribuira a hacer el proceso de planificacin-evaluacin mucho
ms adecuado a cada contexto. La adaptacin del material de evaluacin es un tema de larga
data y hay actualmente docentes que trabajan para que sus estudiantes tengan un mejor acceso
al proceso de evaluacin. Lo que intentamos es comenzar a sistematizar esta informacin, una
vez que se ha demostrado la conveniencia de su uso y aplicacin. Sin contar con el valor que
le otorga el hecho de que la elaboracin de los materiales tiene un bajo coste y que inters
demostrado por los nios y su eficacia est en relacin inversa al mismo.
Coincidiendo con las aportaciones de Verdugo y Rodrguez (2012), es importante
tener siempre presente que para cada estudiante las metas de aprendizaje deben ser
alcanzables, con lo que la evaluacin educativa debe necesariamente trascender lo acadmico
y entrar un poco en el terreno de lo emocional, las relaciones interpersonales y en general la
calidad de vida de los alumnos, con lo que disponer de elementos que faciliten la integracin
978-84-695-8363-0
1157
de todos los aspectos que intervienen en el desarrollo escolar de los nios/as es altamente
recomendable.
Finalmente, es altamente conveniente que el ambiente escolar otorgue flexibilidad y
apoye el funcionamiento individual para potenciar al mximo las capacidades ejecutivas de
los escolares, minimizando los problemas asociados con el rendimiento acadmico. Los
resultados parciales indican que la variedad y la riqueza de los instrumentos de evaluacin, as
como su funcionalidad; permiten que la aplicacin de un sistema de evaluacin alternativo
para el colectivo con NEE sea menos punitivo y como consecuencia ms eficaz.
Referencias
Black, P. y Wiliam, D. (2010). Inside the black box: raising standards through classroom
assessment. Phi Delta Kappan, 92(1), 81-90.
Farmer, J., Towles, E., Kleinert, H., ORegan J., y Kleine M. (2011). Characteristics of and
implications for students participating in alternate assessments based on alternate
academic achievement standards. The Journal of Special Education, 45(1), 3-14.
Hilda, E. (1996). El portafolio como estrategia para la evaluacin. Revista Teora y Didctica
de la Lengua y de la Literatura, 8, 89-96
Klenowski, V. (2003). Desarrollo del portafolio para el aprendizaje y la evaluacin. Madrid:
Narcea.
Ley Orgnica de Educacin (2006). Ley, de 3 de mayo, Orgnica de Educacin. Boletn
Oficial del Estado, 04/05/2006.
Lynn, S., Fuchs, D., Karns, K., Hamllet, C., Katzaroff, M., y Dutka, S. (1997). Effects of taskfocused goals on low-achieving students with and without learning disabilities.
American Educational Research Journal, 34(3), 513-543.
Martnez, M. (1999). La investigacin cualitativa etnogrfica en educacin: manual tericoprctico. Mxico: Trillas.
Mellado, M. (2005). Grado de satisfaccin en relacin con el portafolio en lnea como
herramienta para evaluar la formacin inicial docente. Boletn de Investigacin
Educacional, 20(2), 231-250.
Rezende, R. (2010). La relacin pedaggica y evaluacin en el espejo del portafolio:
memorias docente y discente. Tesis Doctoral. Universidad Federal de Minas Gerais,
Brasil.
Roca, D. (2012). El uso del portafolio del estudiante en el aprendizaje de la asignatura de
administracin y organizacin en la carrera profesional de ingeniera de sistemas e
informtica en la Universidad de Ciencias y Humanidades. Tesis de Maestra.
Universidad Peruana Cayetano Heredia, Per.
S-Chaves, I. (2000). Portafolios reflexivos: estrategia de formacin y supervisin.
Cuadernos Didcticos. Serie Superior. Aveiro: Universidad de Aveiro.
978-84-695-8363-0
1158
978-84-695-8363-0
1159
Resumen
La inclusin de alumnado de otras culturas en los centros educativos en Espaa ha
configurado un nuevo marco de relaciones sociales dentro del aula. En aras de una atencin
a la diversidad del alumnado y de una educacin ms justa y equitativa, se realiz un estudio
con el objetivo de analizar los conocimientos, actitudes y habilidades en relacin a la
educacin intercultural, estudiando posibles diferencias en dicha competencia intercultural
en funcin del gnero y la edad del alumnado. El estudio presenta un enfoque de tipo
cuantitativo con un diseo no-experimental, empleando en las pruebas estadsticas, para el
anlisis de contraste de los datos, estudios descriptivos (frecuencias y porcentajes) y
correlacionales. Los participantes fueron 105 alumnos-as, pertenecientes a un colegio
pblico de Almansa (Albacete). Los resultados mostraron que el alumnado tena suficientes
actitudes interculturales, pero presentaba carencias en relacin a conocimientos y
habilidades. Los datos tambin desvelaron la existencia de diferencias significativas en
competencia intercultural referida a la edad, pero no en cuanto al gnero.
Descriptores: competencia intercultural;
interculturales; educacin inclusiva.
conocimientos,
actitudes
habilidades
Abstract
The inclusion of students from other cultures in the Spanish context has set a new framework
of social relationship inside the classroom. In order to reach a more equitable and inclusive
education, we carried on a research to analyse the intercultural competence (knowledge,
attitudes and skills) in primary education students according their gender and age. The
current study presented a non-experimental, quantitative approach, using descriptive
statistical tests (frequency and percentage) and co-relational studies for the analyses of data.
Participants were 105 students-as from a public school in Almansa (Albacete). Results
showed that students had enough cultural attitudes, but not in knowledge and skills. Data also
revealed the existence of significant differences in intercultural competence relating to age,
but not in terms of gender.
Keywords: intercultural competence; intercultural knowledge, attitudes and skills; inclusive
education.
978-84-695-8363-0
1160
Introduccin
Los movimientos migratorios constituyen un fenmeno de gran trascendencia social,
econmica y poltica en las sociedades actuales. Su importancia no slo radica en su creciente
volumen y extensin a todos los pases del mundo (OCDE, 2002; Informe de la Organizacin
Internacional de las Migraciones, 2005) sino tambin en los grandes desafos de convivencia
que se plantean en los pases europeos y en la problemtica asociada a estos flujos migratorios
hacia los pases industrializados como son la inmigracin irregular y el trfico de personas
(Blanco, 2006). En las ltimas dcadas, los pases de la Unin Europea se han convertido en
sociedades receptoras de inmigracin, entre otros motivos por la baja natalidad, la necesidad
de mano de obra barata y por la atraccin que ejerce el nivel de calidad de vida y de desarrollo
alcanzado. Este hecho ha originado la aparicin de comunidades plurales, transformndose de
forma paulatina el sentimiento de homogeneidad existente hasta entonces en nuestro entorno.
Este cambio en la composicin del grupo social origina necesariamente un cambio en las
relaciones con los recin llegados: unos son aceptados, otros rechazados, etc. En este sentido,
la escuela como institucin social y como agente de socializacin no es ajena al nuevo
fenmeno de la diversidad de culturas y de la interculturalidad. Lovelace (1995) seala que la
emergencia imparable del concepto diversidad se inscribe dentro de un contexto de
reivindicacin de lo personal y de las diferencias. En la actualidad son muchos los grupos de
diversa procedencia que se van incorporando a la sociedad espaola y que traen consigo a
alumnado en edad escolar. Este alumnado tiene el derecho a ser atendido en igualdad de
condiciones y por tanto es preciso proporcionarles las oportunidades necesarias para que se
incorporen a la sociedad. Lo novedoso de la situacin hace que a menudo se planteen
problemas en los contextos educativos a la hora de la integracin de estos alumnos
inmigrantes (Hernndez, Hernndez y Miln, 2006).
Para Snchez (1996), el fenmeno de la interculturalidad en la escuela suele ser
percibido como una nueva dificultad, como otro problema ms que tienen que resolver los
docentes. Los maestros reciben de la sociedad una presin ms o menos tcita para que
amortigen o neutralicen las distintas manifestaciones culturales, que en muchas ocasiones se
entienden de manera negativa y son difciles de aceptar. Sin embargo, las investigaciones
parecen indicar lo contrario, ya que sitan a los centros educativos como una de las
instituciones sociales ms tolerantes. Segn Aguilera (1996), muchos de los conflictos
derivados de una falta de capacidad para la convivencia entre culturas se achacan
habitualmente a las escuelas, y aunque el origen suele estar fuera de ellas, es en los centros
educativos el lugar desde el que hay que empezar a corregir prejuicios y estereotipos
negativos que estn fuertemente arraigados en determinados crculos familiares y sociales.
Por este motivo, la educacin intercultural debe ser una respuesta a la diversidad cultural
existente actualmente, desde una opcin por el dilogo y el intercambio recproco de bienes
culturales. Una autntica cohesin social pasa por la lucha decidida contra los procesos de
fragmentacin y exclusin social, al tiempo que propone a la educacin la tarea de favorecer
dinmicas inclusivas en todos los procesos de socializacin y convivencia.
Es necesario impulsar soluciones para disminuir los estereotipos, prejuicios y
discriminaciones y promover el desarrollo de valores y actitudes de tolerancia, as como el
enriquecimiento de habilidades y conocimientos hacia otras culturas. Sales (1996) seala que
han aumentado las conductas racistas y xenfobas entre sujetos escolarizados hacia personas
de distinta procedencia social, que se traduce en un rechazo a compaeros de otras culturas.
Bliss (1990), Calvo (1993) y Jordn (1994), entre otros muchos, han investigado las creencias
y actitudes del profesorado hacia el alumnado de otras culturas o etnias. Sin embargo, los
978-84-695-8363-0
1161
estudios para conocer las actitudes y otras competencias interculturales que el alumnado tiene
hacia sus compaeros inmigrantes son prcticamente inexistentes. Por este motivo, la
relevancia de investigar en esta lnea queda justificada por la valiosa informacin que el
propio alumnado puede proporcionar sobre sus compaeros de otras nacionalidades o
culturas, partiendo de la premisa de que un alumno estar ms libre de condicionantes de lo
que un docente lo pueda estar. Los datos obtenidos, al proceder de las propias aportaciones de
los alumnos, pueden ofrecer una visin ms realista y ajustada sobre los procesos
interculturales que ocurren en el aula. Por lo tanto, los objetivos planteados para esta
investigacin han sido:
1) Conocer las competencias interculturales (conocimientos, actitudes y habilidades en
relacin a la educacin intercultural) del alumnado de Educacin Primaria.
2) Estudiar posibles diferencias en dichas competencias interculturales en funcin del gnero
y la edad del alumnado.
Mtodo
La investigacin present un enfoque de tipo cuantitativo, emplendose
procedimientos de medida en los que los datos numricos son susceptibles de ser analizados a
travs de tcnicas estadsticas. De esta manera, se consigue que los datos obtenidos se siten
al margen de interpretaciones y de los significados que pueda darle el investigador (Cardona,
2002). Adems, el diseo de la investigacin fue no-experimental, utilizndose en las pruebas
estadsticas para el anlisis de contraste de los datos, estudios descriptivos y correlacionales.
Respecto a los participantes, la muestra se obtuvo a partir de alumnos-as de un
colegio pblico de Almansa, optando por un muestreo de tipo no probabilstico disponible y
siguiendo los criterios de accesibilidad y disponibilidad muestral. Como el primer objetivo de
la investigacin es el de conocer las competencias interculturales del alumnado de Educacin
Primaria, la decisin en la eleccin de la muestra se centr en aquellas aulas en las que
hubiera presencia de alumnado inmigrante, puesto que esta convivencia entre alumnado
autctono y extranjero aportaba datos significativos sobre la realidad intercultural del aula. El
segundo objetivo de la investigacin, estudiar posibles diferencias en las competencias
interculturales en funcin del gnero y la edad del alumnado, hizo necesario un anlisis de los
datos diferencindolos en las variables gnero y edad para tratar de obtener resultados
significativos al respecto.
El instrumento que se utiliz para conocer la competencia intercultural en la presente
investigacin fue el cuestionario CIAP (Autoevaluacin de la Competencia Intercultural en
alumnado de Educacin Primaria) de Hernndez y Cardona (2007). Este instrumento evaluaba
las diferentes dimensiones de la competencia intercultural: conocimientos, actitudes y
habilidades.
El procedimiento consisti en la administracin del cuestionario MCI por parte de los
investigadores sobre una muestra total de 105 alumnos-as en el curso acadmico 2010-2011.
Este cuestionario se pas, en las respectivas aulas de cada nivel seleccionadas para la
investigacin. Antes de la administracin del mismo, se explic brevemente la finalidad del
cuestionario y la manera en cmo tenan que responderlo, eligiendo una posible respuesta en
una escala tipo Likert de cuatro puntos (de Nada de Acuerdo a Muy de Acuerdo).
978-84-695-8363-0
1162
978-84-695-8363-0
1163
cultura me pongo a la defensiva, puesto que los alumnos responden con un significativo
nunca, por encima de la mitad de las respuestas.
Habilidades. Un elevadsimo porcentaje, en torno al 90%, reconoce que siempre
comparte espacio con compaeros de otras culturas, tal y como pregunta el tem 41 (p = .005).
Igualmente, es considerable el porcentaje que contesta siempre o regularmente en el tem 42
(me relaciono con compaeros de otras culturas). En esta lnea, ante el tem 48, la mitad del
alumnado manifiesta que nunca evita pedir favores a sus compaeros de otras culturas. Son
tambin significativos los datos desprendidos del tem 49, intento estar tranquilo cuando me
relaciono con compaeros de otras culturas, puesto que casi la totalidad seala que siempre o
regularmente lo hace. En cuanto al tem 47 (p = .012), no tolero que un compaero de otra
cultura piense diferente a como pienso yo, ms de la mitad manifiesta la opcin nunca,
aunque llama la atencin que alrededor del 30% de los encuestados exprese siempre o
regularmente. Ante el tem 52, prefiero un compaero a otro segn sea de mi pas o de otro,
un porcentaje prximo a la mitad apunta la eleccin nunca; a pesar de ello, ms de la mitad
opta por elegir siempre, regularmente o en ocasiones la preferencia por tener como
compaero a una persona u otra segn sea su origen. No obstante, el 80% siempre respeta las
costumbres de otras culturas, segn se recoge en el tem 56 (p = .004). El porcentaje an es
mayor en la respuesta al tem 58, en la que casi la totalidad de los encuestados, cuando van a
casa de sus compaeros extranjeros, respetan sus costumbres. El tem 60, me esfuerzo en
buscar la mejor manera de relacionarme con compaeros de culturas diferentes, ha obtenido el
consenso de casi la totalidad de las respuesta de la muestra con la suma de los porcentajes de
siempre y regularmente (93%).
Estudio de posibles diferencias en competencia intercultural en funcin del gnero y la
edad del alumnado
No se encontraron diferencias estadsticamente significativas (p <.05) respecto a la
interrelacin entre competencia intercultural y gnero, pero s en cuanto a la edad.
Diferencias en funcin de la edad y conocimientos. Los datos significativos se hallan
en los tem 1, 2, 6, 8, 10, 11, 14, 15, 17 y 20 (p = .000), que hacen referencia,
respectivamente, a: localizo en un mapamundi pases extranjeros, utilizo palabras de saludo
en otras lenguas, muestro inters en cmo se nombran objetos en esas lenguas, comparo cmo
se nombran los objetos, conozco leyendas de otros pases, identifico objetos caractersticos de
esos pases, percibo diferencias en manifestaciones culturales, identifico instrumentos y
canciones propias de otras culturas, percibo mis reacciones de disgusto, soy capaz de apreciar
cmo ven las cosas mis compaeros de otros pases.
Diferencias en funcin de la edad y actitudes. Los resultados ms significativos (p =
.000) se encuentran en los tem 22 (me gustan leyendas de otros pases); tem 24 (no me
importa compartir espacios); tem 25 (busco relacionarme con compaeros extranjeros); tem
27 (me relaciono fuera del centro); tem 28 (me enriquece personalmente estar con
extranjeros); tem 29 (soy afortunado por haber nacido en mi pas); tem 33 (tengo en cuenta
la opinin de otros alumnos extranjeros); tem 36 (considero que a mucha gente no le gustan
personas de otros pases); tem 37 (me pongo a la defensiva ante alumnos extranjeros); e tem
38 (la sociedad debe favorecer a personas de otros pases).
Diferencias en funcin de la edad y habilidades. Los datos ms relevantes (p = .000)
aparecen en los tem 42 (me relaciono con personas de otros pases); tem 43 (me siento en
978-84-695-8363-0
1164
clase cerca de alumnos extranjeros); tem 45 (mi grupo de amigos est formado por personas
de otras culturas); tem 46 (formo equipo de trabajo con compaeros extranjeros); tem 49
(intento estar tranquilo cuando me relaciono con alumnos extranjeros); tem 54 (intento
solucionar conflictos con alumnos extranjeros); e tem 55 (critico el racismo).
Conclusiones
Respecto a la competencia intercultural en el alumnado de Educacin Primaria
participante en este estudio, se puede determinar que en lneas generales los alumnos
encuestados tienen una competencia intercultural socialmente aceptable respecto a los
alumnos procedentes de otros pases y culturas que conviven a diario con los alumnos
autctonos. Sin embargo, los resultados revelan que estas competencias no se producen de la
misma manera en los tres subapartados de la escala: conocimientos, actitudes y habilidades.
Respecto a conocimientos y habilidades interculturales, los resultados nos indican que el
alumnado tiene importantes carencias en estos mbitos. En relacin con las actitudes, un
considerable porcentaje expresa unas actitudes positivas hacia el aprendizaje de lenguas
extranjeras, conocer sus tradiciones culturales, relacionarse con otras culturas, etc. Se constata
cmo los alumnos carecen de conocimientos y habilidades hacia el alumnado de otras
culturas, pero manifiestan actitudes positivas, que son un reflejo de unas respuestas
polticamente correctas hacia la integracin. Los alumnos de 11 aos presentan unas actitudes
socialmente ms deseables: les gusta aprender cuentos de otros pases, no les importa
compartir espacios con alumnos extranjeros, buscan relacionarse en el centro y fuera de l con
compaeros de otras culturas, piensan que tener en su grupo amigos de otras culturas les
enriquecen personalmente, as como consideran que son afortunados por haber nacido en
nuestro pas. Todos estos datos contrastan con las respuestas dadas por los alumnos de 9 aos
cuyas contestaciones se sitan en actitudes menos positivas desde el punto de vista social.
Este hecho puede deberse a que los alumnos ms jvenes responden de manera ms
espontnea y sin condicionamientos sociales. Conforme aumentan en edad sus respuestas
estn ms sujetas a presiones sociales ya que el alumnado adquiere una mayor conciencia
social guiada por unos patrones establecidos socialmente por la cultura dominante.
Por todo ello, se puede concluir que los alumnos de Educacin Primaria participantes
en esta investigacin poseen unas adecuadas competencias interculturales respecto a las
actitudes hacia sus compaeros de otras culturas, pero presentan carencias en cuanto a
conocimientos y habilidades. Tambin cabe resaltar que las competencias interculturales del
alumnado varan en funcin de la edad, pero no del gnero, siendo los alumnos mayores los
que mejor conocimientos, actitudes y habilidades muestran hacia compaeros que proceden
de otros pases, debido a su madurez y a los aprendizajes adquiridos a lo largo de su
escolarizacin.
Referencias
Aguilera, B. y otros (1996). Educacin intercultural. Anlisis y resolucin de conflictos.
Madrid: Popular.
Blanco, C. (2006). Las migraciones internacionales y su impacto social. La integracin y sus
modelos. En P. Soto et al. (Ed.), Hacia el aula intercultural. Experiencias y referentes
(pp. 41-64). Madrid: Ministerio de Educacin y Ciencia.
978-84-695-8363-0
1165
Bliss, I. (1990). Intercultural education and the professional knowledge of teachers. European
Journal of Teacher Education, 13(3), 141-151.
Calvo, T. (1993). Educar para la tolerancia. Madrid: Popular.
Cardona, M.C. (2002). Introduccin a los mtodos de investigacin en educacin. Madrid:
EOS.
Hernndez, J.A. y Cardona, M.C. (2007). Cuestionario de Autoevaluacin de la Competencia
Intercultural en Alumnado de Primaria (documento indito). Alicante: Universidad de
Alicante.
Hernndez, J.A., Hernndez, J.R. y Miln, M.A. (2006). La interculturalidad en la escuela
actual. Una aproximacin a las competencias interculturales del alumnado de
educacin primaria. Ensayos. Revista de la Facultad de Educacin de Albacete, 21,
255-265.
IOM (2005). Informe de la Organizacin Internacional para las Migraciones. Nueva York:
ONU.
Jordn, J.A. (1994). La educacin multicultural. Un reto para el profesorado. Barcelona:
Paids.
Lovelace, M. (1995). Educacin multicultural. Lengua y cultura en la escuela plural. Madrid:
Escuela Espaola.
OCDE (2002). Definition and selection of Competences. Theoretical and conceptual
foundations.
Disponible
en:
http://www.oecd.org/education/skills-beyondschool/41529556.pdf.
Sales (1996). Educacin intercultural y formacin de actitudes. Propuesta de programas
pedaggicos para desarrollar actitudes interculturales en educacin primaria y
secundaria (tesis doctoral indita). Universidad de Valencia, Valencia.
Snchez, S. (1996). Educacin multicultural: posibilidades en la prctica. En Ortega, J.A.
(Coord.), Educacin multicultural para la tolerancia y la paz. Fundamentos y
estrategias didcticas (pp. 102-130). Granada: Grupo editorial universitario.
978-84-695-8363-0
1166
Resumen
El objetivo de nuestro estudio es elaborar un cuestionario para indagar sobre la mejora en la
calidad de la enseanza en los centros de educacin primaria y secundaria gracias a la
inmersin en los procesos TIC. La poblacin estuvo formada por profesorado de la provincia
de Mlaga de las etapas de primaria y secundaria de todas las especialidades que trabajan
en centros TIC. La validacin del cuestionario fue realizada mediante la valoracin y
consenso de jueces. La fiabilidad fue medida a travs de la prueba Alfa de Cronbach,
obteniendo un valor de 0,97. Estos resultados sealan que el cuestionario es fiable.
Descriptores: cuestionario, nuevas tecnologas, TIC, primaria, secundaria, profesorado,
calidad de la enseanza.
Abstract
The aim of our study it is to elaborate a questionnaire to investigate on the improvement in
the quality of the education in the centers of primary and secondary education thanks to the
dip in the processes TIC. The population was formed by professorship of the province of
Malaga of the stages of primary and secondary of all the specialities that are employed at
centers TIC. The validation of the questionnaire was realized by means of the valuation and
judges' consensus. The reliability was measured across the test Cronbach's Alpha, obtaining
a value of 0,97. These results indicate that the questionnaire is trustworthy.
Keywords: Questionnaire, new technologies, tic, primary, secondary, professorship, quality
of the education.
Introduccin
No podemos negar que en los ltimos aos la inclusin de las nuevas tecnologas de la
informacin y la comunicacin (TIC a partir de ahora) se ha convertido en uno de los
fenmenos que han marcado un antes y un despus en la historia de la educacin. Su uso en
los centros educativos est adquiriendo una creciente relevancia como fuente de recursos para
el docente.
Hace ahora 26 aos, la Consejera de Educacin puso en marcha el Plan Alhambra.
Este era un Plan pionero de integracin de las nuevas tecnologas en la Educacin.
Actualmente, pocos se cuestionan la importancia de las nuevas tecnologas en los centros
978-84-695-8363-0
1167
educativos. A pesar de los cambios tecnolgicos que se han sucedido en estas casi tres
dcadas, los proyectos de entonces y los de ahora tienen mucho en comn: el cambio, la
mejora, la experimentacin, la innovacin educativa. (Ruiz, Snchez y Palomo, 2005)
Hoy en da, estamos finalizando en los centros educativos andaluces proyectos
relacionados con la inmersin de las TIC en las aulas y tambin los proyectos de mejora de la
calidad educativa. Para estos proyectos el gobierno ha invertido grandes cantidades del
presupuesto para capacitar a los docentes en el uso de las TIC y para dotar de equipos
informticos a los centros, conexin a internet y contenidos educativos en formatos
multimedia. Segn podemos comprobar en numerosas investigaciones (Ruiz y Snchez, 2010)
ambos conceptos, TIC y Calidad estn muy relacionados ya que el uso de las TIC como
herramienta para el aprendizaje est haciendo que aumente la calidad de los procesos
educativos.
El ejercicio de la docencia ha sido objeto de avance en los ltimos aos a raz de la
incorporacin de las nuevas tecnologas en el mbito de la educacin, variando la forma de
acercamiento entre profesores, alumnos y padres (Daz, Daz y Chinchilla, 2012). La
obligacin del profesorado a integrarse en esta nueva forma de impartir su docencia de una
manera tan extremadamente vertiginosa ha supuesto una revolucin a nivel formativo del
mismo, ya que en un corto espacio de tiempo se ha visto forzado a adquirir unos
conocimientos muy especficos de una materia totalmente desconocida hasta hace una
dcada.Sin el docente, la incorporacin de las TIC al proceso de enseanza-aprendizaje no se
producira, pues en definitiva el uso y la responsabilidad de las mismas recae en l (Cabero,
2004; Ertmer, 2005).
La cuestin que aqu se plantea es si la integracin de estos recursos ha mejorado
realmente la prctica educativa, cuestin esencial que se debera plantear a nivel legislativo
para abordar el tema desde quiz otra perspectiva. La opinin del profesorado junto a los
resultados obtenidos en cuestiones relacionadas con la calidad educativa son dos premisas
fundamentales para replantearse, en ese caso, otros mtodos alternativos a las TIC o, por el
contrario, si los resultados fueran positivos, una continuidad de los mismos.
Pero tambin debemos tener en cuenta si existe entre el profesorado unos nuevos
enfoques de aprendizaje. Por ello el objeto de nuestra investigacin es analizar la relacin
existente entre la inmersin de las TIC en los centros educativos de los niveles de primaria y
secundaria y la mejora de la calidad de la educacin teniendo en consideracin los nuevos
enfoques de enseanza utilizados por el profesorado en las aulas.
Mtodo
Instrumento
Preocupados por la situacin actual de las TIC y la mejora de la calidad en los centros,
un equipo multidisciplinar de trabajo formado por profesorado universitario (6 miembros) y
maestros de primaria y secundaria (13 miembros que trabajan en 14 centros educativos de la
provincia de Mlaga) elaboraron un cuestionario para indagar sobre la situacin actual al
respecto.
En la elaboracin del cuestionario piloto, se tuvieron en cuenta las siguientes etapas
(Selltiz, 1980:722):
978-84-695-8363-0
1168
N de cuestiones
De la 1 a la 11
De la 12 a la 19
De la 20 a la 65
De la 66 a la 91
De la 92 a la 110
978-84-695-8363-0
1169
978-84-695-8363-0
1170
primaria o secundaria con una larga experiencia en el mbito docente y adems tenan un
amplio conocimiento del proceso de investigacin, puesto que pertenecen al mbito
acadmico universitario. Este comit valor positivamente la relacin entre los tems del
cuestionario y los contenidos que se pretendan evaluar, aunque se tuvo que modificar de
nuevo el cuestionario, eliminando algunos de los tems que consideraban repetitivos o poco
concisos.
Muestra
La muestra escogida para llevar a cabo el desarrollo y prueba piloto de nuestro
cuestionario ha sido 31 profesores/as. El tipo de muestreo empleado para seleccionar la
muestra fue no probabilstica deliberado (Buenda, Cols y Hernndez, 1998). El profesorado
al que se le pas el cuestionario es escogido por el equipo de investigacin, todos ellos
pertenecientes a un centro pblico de primaria de la provincia de Mlaga.
Anlisis estadstico
Una vez recogidos los cuestionarios, los datos fueron analizados mediante el programa
de anlisis estadstico IBM SPSS Statistics versin 20.
Resultados
Validacin del instrumento
Para comprobar si los tems del instrumento indagaban sobre lo que realmente
queramos investigar, la validez de contenido se midi a travs de un sistema de jueces
expertos que clasificaron y juzgaron la adecuacin de las categoras establecidas, en funcin
de los fundamentos tericos y del objetivo del cuestionario. Se eligieron cinco jueces,
profesores universitarios con formacin en el campo de las nuevas tecnologas y la calidad en
la enseanza, siendo todos ellos doctores, tal y como aparece en la siguiente tabla. De forma
independiente contestaron al cuestionario y realizaron una reflexin sobre cada uno de los
tems de tal manera que sealaban las modificaciones ms importantes que se deban realizar
al cuestionario en una columna habilitada para ello a la derecha del cuestionario. Tras una
primera revisin se hicieron las modificaciones pertinentes y se les volvi a enviar de nuevo,
hasta que hubo consenso en las cuestiones del instrumento.
Tabla 2
Expertos consultados
Sexo
Aos de
dedicacin
Experto 1
Experto 2
11
Experto 3
14
Experto 4
29
Experto 5
30
Nivel Educativo
Primaria
Universidad
Primaria
Secundaria
Universidad
Primaria
Secundaria
Universidad
Universidad
Secundaria
Universidad
Doctorado
S
S
S
S
S
978-84-695-8363-0
1171
Alfa de Cronbach
0,810
0,937
0,910
0,962
Como podemos comprobar el ndice del Alfa de Cronbach se encuentra en todos los
bloques por encima de 0,70, lo que nos indica que cada uno de los bloques de manera
independiente tienen una alta fiabilidad.
Conclusiones
Tras el anlisis y valoracin del grupo de expertos se puede decir que el cuestionario
diseado es vlido, es decir, consigue evaluar lo que en un principio se pretenda: la
influencia en la calidad de la enseanza en centros de educacin primaria y secundaria gracias
978-84-695-8363-0
1172
a la inmersin en los procesos tic. As, gracias al coeficiente de Alfa de Cronbach podemos
decir que el cuestionario tiene consistencia interna y es fiable.
Por lo tanto podemos decir que, tras este estudio, el instrumento diseado puede ser
utilizado para conocer de qu manera est mejorando la calidad en los procesos de enseanzaaprendizaje en los centros con inmersin en proyectos TIC y de calidad.
Referencias
Cabero, J. (2004) Estrategias para la formacin del profesorado en TIC. Disponible en:
http://www.pucmm.edu.do/RSTA/Academico/TE/Documents/fd/efpt.pdf
Cohen, L. y Manion, L. (1990). Mtodos de investigacin educativa. Madrid: La Muralla.
Daz, D., Daz, M.A. y Chinchilla, J.L. (2012) La tutora dentro del marco de la nueva era
digital. En P. Membiela, N. Casado y M.I. Cebreiros (Eds.), La formacin y las nuevas
tecnologas en la docencia universitaria (pp.201-206). Ourense. Espaa:Educacin
Editora.
Ertmer, P. A. (2005). Teacher pedagogical beliefs: the final frontier in our quest for
technology integration? Educational Technology Research and Development, 53(4),
25-39.
Palomo Lpez, R., Ruiz Palmero, J. y Snchez Rodrguez, J. (2005) Las TIC como agente de
innovacin educativa. Sevilla. Edita: Consejera de Educacin. Junta de Andaluca.
Ruiz Palmero, J. y Snchez Rodrguez, J. (2010). Investigaciones sobre buenas prcticas con
TIC. Mlaga. Ediciones Algibe.
Selltiz, y otros. (1980) Mtodos de investigacin en las relaciones sociales. Madrid: Rialp.
Vilanova, S., Garca M. B. y Seorio, O. (2007). Concepciones acerca del aprendizaje:
diseo y validacin de un cuestionario para profesores en formacin. Disponible en:
http://redie.uabc.mx/index.php/redie/article/view/169/292
978-84-695-8363-0
1173
Resumen
En este trabajo se ofrece una aproximacin emprica del grado de ajuste de los/as estudiantes
sobre su perfil competencial y la valoracin que hacen de las competencias en base a la
importancia que le conceden. De ah que los datos y resultados obtenidos, sean sumamente
relevantes para delinear acciones estratgicas que permitan la adecuacin entre las
demandas laborales y la formacin acadmica-profesional adquirida durante sus estudios
universitarios. La investigacin es descriptiva y la recogida de informacin se realiza a
travs del mtodo de encuesta, aplicando para ello un cuestionario ad hoc. La poblacin
objeto de estudio la comprende los/as estudiantes de Psicopedagoga de la Facultad de
Ciencias de la Educacin de la Universidad de Sevilla.
Descriptores: Competencias profesionales, Perfiles competenciales, Empleabilidad, Grado
de ajuste de competencias, Orientacin profesional.
Abstract
In this paper provides an empirical approach to the degree of adjustment in the students on
their competency profile, the assessment of them based on the importance they offer, and
professional fields to those who seek to direct their efforts to enter in the labour market.
Hence, dates and results obtained are highly relevant to outline strategic actions that allow
the adjustment of labour demands and academic-professional training acquired, during their
university studies. The research has been based on the guidelines of a descriptive and ad hoc
questionnaire has been used for data collection. The targets studied are understood to be 2nd
year students of the Bachelor of Arts in Educational Psychologist.
Keywords: Professional competences, Competency profiles, Employability, Degree of
adjustment, Professional guidance.
Introduccin
Con la entrada en vigor del Espacio Europeo de Educacin Superior y la consiguiente
reforma de las titulaciones universitarias, nos encontramos ante un momento de reformulacin
de los modelos educativos orientados hacia el desarrollo de competencias profesionales. Este
cambio en el sistema universitario espaol persigue, como uno de sus objetivos, una mayor
adecuacin entre los requerimientos profesionales del mercado laboral y la formacin
impartida en las universidades.
978-84-695-8363-0
1174
978-84-695-8363-0
1175
an no ven reconocidas sus funciones a pesar de ser demandados para ocupar puestos de
trabajo.
Ante esta situacin, parte del estudio que se expone en este trabajo tiene como
objetivo principal determinar el grado de ajuste del perfil competencial de los/as estudiantes
de Psicopedagoga en base a las distintas competencias generales necesarias para insertarse
laboralmente. Por lo que se entiende por grado de ajuste, el grado de adecuacin entre las
competencias que poseen, la importancia que le conceden a las mismas para su futuro
profesional y el mbito al que quieren dirigir sus esfuerzos para insertarse laboralmente. En
este sentido, se considera que el conocimiento de los perfiles competenciales y su grado de
ajuste en base a los diferentes mbitos en los que pueden desarrollarse profesionalmente
los/as psicopedagogos/as, es de vital importancia para garantizar mayores posibilidades de
xito en su inminente proceso de bsqueda de empleo y futura insercin laboral.
Mtodo
La parte del estudio que se presenta tiene un enfoque de corte cuantitativo, en donde a
partir de un diseo transversal y empleando la correlacin (coeficiente de Pearson) como
estadstico clave, se conoce el grado de ajuste en los perfiles competenciales del alumnado. La
obtencin de datos se realiza a travs del mtodo encuesta, para ello se utiliza un cuestionario
ad hoc. La poblacin objeto de estudio la comprende los/as estudiantes de 2 curso de la
Licenciatura de Psicopedagoga de la Facultad de Ciencias de la Educacin de la Universidad
de Sevilla, cuya muestra result 64 estudiantes (81.5% mujeres y 18.5% hombres), con una
media de edad de 25.38 aos. El procedimiento de anlisis de los datos recogidos se ha
llevado a cabo mediante el paquete informtico SPSS (versin 19.0), aplicando estadsticos
correlacionales. Las variables generales objeto de estudio giran en torno a: edad, sexo,
situacin laboral actual, grado de importancia de las competencias en el desarrollo profesional
como Psicopedagogo/a, grado de adquisicin de las competencias y mbito profesional
elegido.
Resultados
Grado de ajuste en las competencias generales
La Tabla 1 muestra los resultados respecto al grado de ajuste de las competencias de
carcter general, es decir, aquellas competencias presentes en cualquier mbito de desarrollo
de la titulacin de Psicopedagoga. Por lo que en base a este grado de ajuste existe una
relacin significativa entre la importancia que conceden a la competencia Capacidad de
liderazgo y el grado de adquisicin de la misma, mostrando un coeficiente de correlacin
(positivo) de 0,460**, en un nivel de confianza del 99 %. Del igual modo, se encuentra grado
de ajuste en la competencia Habilidad en las relaciones interpersonales, mostrando una
relacin significativa con un coeficiente de correlacin de 0,294*, en un nivel de confianza
del 95%. Lo mismo ocurre en la competencia Capacidad de responsabilidad y compromiso
tico aprecindose relacin de significatividad, con un coeficiente de correlacin positiva de
0,354** para un nivel de confianza del 99%.
Sin embargo, no se aprecia relacin de significatividad en el resto de competencias
generales presentando coeficientes en donde el nivel de significacin supera los valores fijos.
Entre estas competencias, se destacan Habilidad para actuar con empata (0,242);
Capacidad para la resolucin de problemas y la toma de decisiones (-0,025); Capacidad
978-84-695-8363-0
1176
Coeficiente
de correlacin
0,182
-0,059
-0,025
0,194
Capacidad de responsabilidad y
compromiso tico
0,354**
Capacidad de liderazgo
0,460**
Habilidad en las relaciones interpersonales
0,294*
Habilidad para ser creativo, tener
iniciativa y espritu emprendedor
0,126
Habilidad para actuar con empata
0,242
978-84-695-8363-0
1177
Discusin
Uno de los objetivos marcados en la investigacin marco de donde emana este texto ha
girado en torno al estudio del grado de ajuste del perfil competencial de los/as
psicopedagogos/as y, en este sentido, a tenor de los resultados obtenidos, es evidente
quelos/as estudiantes de 2 curso de la Licenciatura en Psicopedagoga presentan desajustes
en su perfil competencial en base a las demandas del mercado laboral. Por lo que se puede
concluir que las competencias generales en las que muestran menor grado de ajuste son
aquellas que tienen relacin con conocimientos ms conceptuales y procedimentales, a
diferencia de lo que ocurre con las competencias ms actitudinales en donde se observa un
mayor grado de ajuste. Esta conclusin tiene una doble lectura: por un lado, es muy positivo
que el alumnado posea determinadas capacidades relacionadas con la tica profesional y las
relaciones humanas ya que los/as psicopedagogos/as desarrollan su actividad profesional en
contextos sociales y educativos; por otro, preocupa notablemente que a nivel tcnico no posea
un grado de preparacin adecuado para afrontar las demandas de los diferentes agentes.
Por tanto, la coyuntura actual de desarrollo del Espacio Europeo en relacin a la
educacin y al trabajo, nos impulsa a buscar medidas adecuadas que sirvan para implantar los
objetivos acadmicos-profesionales desde todas y cada una de las ciencias con la prctica
profesional. As mismo, cobra relevancia una adecuada formacin basada en competencias
que posibilite trasladar de forma real la teora al campo de accin profesional, potenciando el
aprendizaje autnomo y la transferencia de los conocimientos.
Para finalizar, teniendo en cuenta los resultados expuestos, se propone seguir
trabajando en torno a la configuracin del perfil competencial y el desarrollo de competencias
profesionales que optimice la empleabilidad de los/as egresados/as, actuando de forma
proactiva, no esperando ni confiando en que sea el ejercicio profesional el nico espacio
adecuado para el desarrollo de determinadas competencias.
Referencias
Argudn, Y. (2007). Educacin basada en competencias. Nociones y antecedentes. Mxico:
Trillas.
Coll, C. y Martn, E. (2006). Vigencia del debate curricular. Aprendizajes bsicos,
competencias y estndares. Actas de la II Reunin del Comit Intergubernamental del
Proyecto Regional de Educacin para Amrica Latina y el Caribe (PRELAC).
UNESCO-OREALC. Oficina Regional de Educacin para Amrica Latina y el Caribe.
Santiago de Chile, 11-13 de mayo de 2006.
Delors, J. (Coord.) (1996). La educacin encierra un tesoro. Informe de la UNESCO de la
Comisin Internacional sobre educacin para el siglo XXI. Madrid: Santillana.
Gil, M R. (2006). Desafos en la insercin ocupacional femenina. Revista Innovacin
Educativa, 16, 275-284.
Gil, M R. y otros (2012). Anlisis del grado de ajuste sobre el perfil competencial del
estudiante: estrategias de orientacin profesional universitaria. Revista Innovacin
Educativa, 22, 203-215.
978-84-695-8363-0
1178
978-84-695-8363-0
1179
Resumen
Este trabajo se enmarca dentro del Proyecto de Innovacin Docente (PID_2012 IP: Rubio,
M.J.) Un sistema de portafolio digital para la mejora de competencias transversales de la
Universidad de Barcelona. Pretende constituir una herramienta bsica, plural y global en la
adquisicin y evaluacin de las competencias (transversales y especficas), favoreciendo una
mejora del aprendizaje mediante una evaluacin continuada como la que sugiere el Espacio
Europeo de Educacin Superior. El presente pster pretende presentar la experiencia de la
asignatura de Teora y Prctica de la Investigacin Educativa (que cuenta con cuatro grupos
y un total de 250 estudiantes), y los cambios docentes que ha conllevado. La metodologa de
trabajo implementada consiste en integrar estrategias que favorezcan el desarrollo de las
competencias propuestas y que permitan al estudiante auto-gestionar su proceso de
aprendizaje, utilizando el portafolio como ayuda fundamental para esto.
Descriptores: competencias transversales, portafolio digital, evaluacin continua.
Abstract
This work is part of the Teaching Innovation Project (PID_2012 IP: Rubio, M.J.) A digital
portfolio system to improve generic skills at the University of Barcelona. Its aim is to
integrate, over the Pedagogy degree, the digital portfolio use as a basic tool, pluralistic
global acquisition and assessment of competences (transversal and specific), promoting
improved learning through continuous assessment as which the European Higher Education
Area. This poster expect to present the experience of the subject of Theory and Practice of
Educational Research (which has four groups with a total of 250 students), and the docent
changes that has entailed. The methodology implemented is to integrate strategies to promote
skills development proposals and allow the student to self-manage their learning process,
using the portfolio as a fundamental support for this.
Keywords: transversal competence, digital portfoli, continuous assessment.
978-84-695-8363-0
1180
Introduccin
Este trabajo se enmarca dentro del Proyecto de Innovacin Docente (PID_2012 IP:
Rubio, M.J.) Un sistema de portafolio digital para la mejora de competencias transversales
de la Universidad de Barcelona. La implementacin de esta experiencia en el curso 2012-13
involucra a varias asignaturas del grado de Pedagoga.
La adaptacin de los estudios de grado, de acuerdo con las directrices del Espacio
Europeo de Educacin Superior (EEES), concuerda con el mundo del trabajo que, desde hace
dos dcadas, est definiendo los perfiles profesionales mediante competencias (Rodrguez
Gascons, 2010). En ese sentido, las definiciones de competencia que hace el proyecto
Tunning (Gonzlez y Wagenaar, 2003) sirven de referencia y punto de partida para el diseo
de las nuevas titulaciones. En el documento firmado por COPEC y ANPE (2005) dos
entidades profesionales se hace una aproximacin al concepto de competencia detallando
las capacidades que debe tener un pedagogo(a) en el ejercicio de sus funciones. Desde esta
perspectiva, el portafolio digital pretende favorecer la mejora del aprendizaje de los
estudiantes basndose en competencias y estableciendo una metodologa de evaluacin
continuada, tal como sugiere el EEES.
El proyecto tiene la finalidad de analizar el grado en el que el uso del portafolio ayuda
a desarrollar competencias transversales de los(as) estudiantes, posibilitando una mejor
organizacin del conjunto de sus aprendizajes (por las facilidades de depsito, organizacin y
publicacin que permite el portafolio).
La Carpeta Digital es una herramienta implementada por diversos docentes de
diferentes estudios y testeada a lo largo de su proceso de desarrollo desde su creacin en el
2006. Esta trayectoria avala su potencialidad como sistema de portafolios. La herramienta est
enfocada a mejorar el aprendizaje de los estudiantes atendiendo las guas propuestas por el
EEES. Las bases que fundamentan el actual modelo europeo educativo y que la Carpeta
Digital potencia son, como se mencion anteriormente, el aprendizaje basado en la
adquisicin de competencias y el establecimiento de una metodologa de evaluacin
continuada.
El proyecto de innovacin, por lo tanto, pretende implementar un sistema de
portafolios digital para la mejora del proceso de aprendizaje del alumnado del Grado de
Pedagoga, centrndose en las asignaturas metodolgicas de estos estudios.
Tambin se contempla la finalidad de conocer cmo el sistema de portafolios afecta a
la organizacin de la docencia, los cambios curriculares y las metodologas didcticas que
supone el uso de una estrategia de evaluacin basada en carpetas digitales.
Como destaca Ru (2008), la introduccin del portafolio genera diversos efectos sobre
los procesos de enseanza y aprendizaje, tales como:
-
978-84-695-8363-0
1181
Genera una visin mucho ms cualitativa y ampliada del proceso de valoracin que
denominamos como evaluacin de los aprendizajes.
Potencia la autonoma del alumno, tanto en la planificacin y desarrollo de sus
trabajos como en el fortalecimiento de su capacidad de juicio sobre lo que hace.
978-84-695-8363-0
1182
978-84-695-8363-0
1183
Informacin
Valoracin de las
opciones
0
(inaceptable)
Toma de decisiones
1
(deficiente)
2
(bueno)
No tiene la
informacin, pero
la busca de forma
pobre o
inapropiada.
3
(muy bue no)
Tiene la
informacin y si no
la tiene la busca
adecuadamente.
No tiene la
informacin y no
la busca.
No hay
contraste;
Utiliza algunos
criterios poco
adecuados para
contrastar;
Utiliza algunos
criterios vlidos
para contrastar;
Utilita varios
criterios vlidos
para contrastar;
Desecha las
opciones sin
argumentos.
Los argumentos
para desechar las
opciones son
pobres.
Los argumentos
para desechar las
opciones son
buenos.
Los argumentos
para desechar las
opciones son
buenos y
razonados.
978-84-695-8363-0
1184
Tabla 2
Preguntas hechas a los estudiantes respecto a la competencia de toma de decisiones en el desarrollo
de la Actividad 1
1) Crees que tenas suficiente informacin para elegir las fuentes ms adecuadas?
2) Si no la tenas, dnde has buscado la informacin necesaria?
3) Has comparado las diferentes opciones de fuentes? Haciendo un balance de los pros y contras de cada
una?
4) Por qu has desechado las otras fuentes? (autora desconocida, aportan informacin poco relevante, el tema
de la fuente no est directamente relacionado con el mo, otros)
Resultados
La implementacin del uso del portafolio en la asignatura de Teora y Prctica de la
Investigacin Educativa ha implicado un proceso paulatino en el manejo de la herramienta por
parte de estudiantes y profesores, quienes contaron con una formacin para aprender a utilizar
el Portafolio Digital de la Universidad de Barcelona. Como todo proceso, ha requerido un
tiempo de adaptacin y familiarizacin que ha implicado un aumento de la carga de trabajo
para todas las personas implicadas.
El profesorado ha debido destinar ms tiempo a la correccin de trabajos, ya que el
manejo del portafolio ha sido inicialmente complicado por la poca prctica con la
herramienta. An as, la experiencia ha sido positiva, por el hecho de contar con una
plataforma que, a diferencia del Campus Virtual, permite a los(as) estudiantes ser
creativos(as) en el diseo y organizacin de su carpeta digital, pudiendo adems autoevaluar
sus competencias en cada actividad de aprendizaje.
En cuanto al alumnado, si bien ha requerido de un perodo de adaptacin y
conocimiento del portafolios, una vez pasadas las primeras experiencias, su uso ha sido ms
fcil y la autonoma ha aumentado paulatinamente. Pese la necesidad de adaptacin a la que
se haca mencin, la apropiacin por parte de los alumnos y alumnas del portafolio ha sido
positiva y, salvo algunos casos, ha sido trabajado por todos los estudiantes.
En relacin a las competencias transversales que se pretenden favorecer con el uso del
portafolio digital, se cuenta con resultados preliminares en relacin a la capacidad de Toma de
Decisiones, la cual se ha recogido en la rbrica antes mencionada. La muestra consta de 179
estudiantes, pertenecientes a los distintos grupos en los que se imparte la asignatura, tanto del
turno de la maana como de la tarde y se ha realizado un anlisis descriptivo de los datos
obtenidos.
En la escala de evaluacin de 0 a 3, se observan unos resultados bastante elevados en
las medias de los estudiantes respecto a la competencia evaluada.
978-84-695-8363-0
1185
A partir del grfico se desprende que los estudiantes han desarrollado la competencia
analizada en un nivel medio elevado. As pues, el primer indicador, que hace referencia a la
bsqueda de informacin, presenta una media de 2,2 sobre 3; el segundo indicador de la
competencia de Toma de Decisiones tiene un resultado inferior que el primero pero tambin
se sita en unos valores elevados (Media=1,9). Los datos presentan un adecuado nivel de
fiabilidad ( de Cronbach = 0,692).
A continuacin se presentan los estadsticos descriptivos de los datos (Tabla 3).
Tabla 3
Estadsticos descriptivos
Informacin
N
Vlidos
Perdidos
Media
Mediana
Moda
Desv. tp.
Varianza
Mnimo
Mximo
140
39
2,21
2,00
2
,694
,482
0
3
Valoracin de
opciones
140
39
1,88
2,00
2
,734
,539
0
3
Los 39 estudiantes que aparecen en la Tabla 3 como perdidos, son aquellos que han
optado por el mtodo de evaluacin nica o que no presentaron la primera actividad (en
menor medida) y por lo tanto no se dispone de los datos referentes a su desarrollo
competencial.
978-84-695-8363-0
1186
Discusin
De acuerdo a los resultados obtenidos del proceso de implementacin del Portafolio
Digital, se ha requerido de un perodo de formacin y adaptacin, tanto del profesorado como
de los estudiantes, ya que la incorporacin de una nueva herramienta comporta
inevitablemente un tiempo de aprendizaje prudencial. Como toda herramienta, se debe
aprender tambin a emplearla por parte de profesores y alumnos, quienes deben aprender a
desarrollarla y a sacar partido de ella (Ru, 2008).
A partir de los primeros resultados recogidos en relacin al desarrollo de las
competencias transversales, se observa un adecuado nivel de logro, a la espera de disponer de
datos relativos a las otras competencias que se trabajan en la asignatura.
La proyeccin de este estudio pretende que el uso e implementacin del portafolio
como herramienta de trabajo y evaluacin, se extienda a otras asignaturas de la Facultad de
Pedagoga y a otras titulaciones universitarias.
Referencias
ANPE-COPEC (2005). Perfil Professional del Pedagog, documento unitario sobre el perfil
profesional del pedagogo, firmado el 12/11/2005.
Gonzlez, J. y Wagenaar (2003). Tuning Educational Structures in Europe. Informe final.
Fase 1. Bilbao: Universidad de Deusto.
Rodrguez Gascons, R. (2010). La definici de competncies del Pedagog/a. Educaci i
xarxa: La revista del Collegi de Pedagogs de Cataluny, 4, 35-37. Disponible en
internet http://www.pedagogs.cat/doc/COPEC-Eix-4.pdf.
Ru, J. (2008). El portafolio del alumno, herramienta estratgica para el aprendizaje. Aula de
Innovacin Educativa, 169.
978-84-695-8363-0
PARTE IV
1188
978-84-695-8363-0
1190
Resumen
La presente investigacin intenta conocer las expectativas profesionales y laborales que
tienen los alumnos que se matriculan en el Mster Universitario en Profesorado de
Educacin Secundaria (2012/13) de la Universidad de Mlaga, y la motivacin de estos para
dedicarse a la docencia. Es un estudio descriptivo con una muestra elegida de forma casual.
Se ha elaborado un cuestionario online contestado por 117 alumnos. Los resultados muestran
una tendencia a realizar el Mster Universitario y sus estudios con el objetivo de dedicarse a
la docencia. Ms del 50% manifiestan tener vocacin docente y ms del 70% la consideran
como una posible salida profesional. Piensan que es una profesin estable, aunque no la ven
como una salida profesional ante las actuales dificultades del mercado laboral.
Generalmente eligen este Mster para ampliar los estudios y para ser docentes y no,
precisamente, por encontrarse en una situacin de desocupacin laboral.
Descriptores: Motivacin, Formacin inicial del profesorado, Expectativas docentes, Mster
Universitario en Profesorado de Educacin Secundaria.
Abstract
This research looks for knowing professional and labor expectations of students who enroll in
the Master's Degree in Secondary Education Teachers (2012/13) of the University of Mlaga,
and their motivation to engage in teaching. It is a descriptive study with a sample chosen by
chance. An online questionnaire answered by 117 students has been developed. The results
show a tendency to do the Master's Degree and its studies in order to dedicate themselves to
teaching. More than 50% say they are called to teach and over 70% consider it as a possible
career opportunity. They think it is a stable profession, even if they dont see it as a career
opportunity facing the current labor market difficulties. They often choose that Master in
order to extend the studies and to be teachers and not just for being in an unemployment
situation.
Keywords: Motivation, Initial teacher training, Teacher expectations, Master's Degree in
Secondary Education Teachers.
978-84-695-8363-0
1191
Introduccin
La sociedad actual tiende a convertir los problemas sociales en problemas educativos y
a demandar de la escuela la solucin a estos problemas. Al mismo tiempo hay una tendencia a
recuperar la figura central del profesor, en base a la conviccin de que la calidad de la
enseanza depende fundamentalmente de la altura personal, pedaggica y cientfica de
nuestros profesores (Esteve, 2002). La idea de que el factor humano es el elemento central
para conseguir una mayor calidad de la educacin est estrechamente ligada a los sistemas de
formacin y seleccin del profesorado en todos los niveles educativos y de forma especial en
la Educacin Secundaria. El profesor de Educacin Secundaria en Espaa no es un
profesional que se ha formado en la universidad para el desempeo de esta tarea, como ocurre
con los docentes de la Educacin Infantil o de la Primaria. Es un especialista en una rama del
saber, ha estudiado y obtenido una licenciatura o un grado en humanidades, ciencias
experimentales, ciencias de la salud, ciencias jurdicas, etc. Como docente tiene que ser,
adems de un especialista en su materia, un educador y formador de jvenes en proceso de
desarrollo y, por tanto, debe ser un buen tutor y orientador. La existencia de una Educacin
Secundaria Obligatoria modifica el quehacer de los profesores y las instituciones que ahora
han de ser educadores y no slo enseantes (Gimeno,2000:101).
La docencia es una profesin, y como tal, requiere que las personas que se dedican a
ella posean la competencia profesional necesaria para llevarla a cabo. El Mster de
Secundaria habilita para el ejercicio de la docencia, facilita a los futuros profesores las
competencias necesarias para ejercer la profesin proporcionando conocimientos tericos,
habilidades, actitudes y contacto con la profesin desde los mbitos terico y prctico, pero
ensear en la actualidad es ms que una prctica cognitiva e intelectual, es tambin un
proceso social donde la comunicacin dentro y fuera del aula, se convierte en un elemento
esencial del proceso. Este proceso comunicativo tiene como parte integrante y fundamental
del proceso educativo la motivacin, no slo del alumnado sino tambin del profesorado. Sin
embargo, uno de los problemas ms comunes con los que nos encontramos en nuestro pas es
que cada vez ms, los que acuden a la profesin de enseante no lo hacen como primera
opcin sino como ensima o nica opcin, debido a varias razones entre las que destacan las
dificultades actuales en el mercado laboral. Tambin estn quienes lo hacen ms por sus
recompensas extrnsecas (salario, vacaciones, estabilidad), que por su contenido intrnseco.
En un momento en que los alumnos cada vez necesitan ms, los profesores ofrecen menos
(Fernndez, 2006). La falta de vocacin y motivacin del futuro profesorado de Educacin
Secundaria provoca que para muchos la formacin inicial sea un puro trmite administrativo
de obligado cumplimiento. En esto diferimos con otros pases de Europa donde los principales
motivos que esgrime el profesorado de Secundaria para elegir esta profesin est relacionado
con la satisfaccin que conlleva ensear a los ms jvenes la especialidad para la que se han
formado en la universidad (Snchez y Boix, 2008).
En el momento actual el profesor requiere nuevas estrategias, percepciones,
experiencias y conocimientos para poder dar respuesta a los mltiples interrogantes que se le
presentan cada da. Para esto es necesario concebir al docente bajo otro paradigma, no slo
definir sus competencias, sino desentraar los elementos cognitivos, actitudinales, valorativos
y de destrezas que favorecen la resolucin de problemas educativos, desde todos los niveles
de desempeo docente. Se concibe, desde esta perspectiva, a un educador capaz de despertar
el inters por aprender, cmo aprender y mantener al da estos conocimientos (Galvis, 2007).
Esta realidad debe ser conocida por los futuros docentes en formacin con indepedencia de las
978-84-695-8363-0
1192
978-84-695-8363-0
1193
Opinin de los alumnos sobre la docencia como una posible salida profesional.
En algunas de las preguntas del cuestionario se introdujo un espacio en blanco para
que los alumnos pudieran expresar y justificar las respuestas con el fin de poder conseguir una
informacin mucho ms rica y completa sobre las mismas.
La muestra participante estuvo constituida por un total de 117 alumnos del total de la
poblacin de estudio que, en este caso, eran los alumnos del Mster de Secundaria de la
Universidad de Mlaga. Ante la imposibilidad de realizar un muestreo aleatorio efectivo que
garantizara las propiedades probabilsticas de la muestra, se opt por realizar un muestreo no
probabilstico de tipo incidental o casual, solicitando para ello la participacin voluntaria del
alumnado del Mster en nuestro estudio a travs del cuestionario on-line.
Anlisis de datos
Tras analizar los resultados y teniendo en cuenta los apartados anteriormente descritos
en el cuestionario, haremos en primer lugar un anlisis descriptivo de la muestra elegida para
despus centrarnos en los objetivos de la investigacin. As, podemos observar en primer
lugar que las mujeres se han implicado mucho ms en responder al cuestionario que los
hombres, casi el doble (M=65%, H=35%), esto, en cierta medida, puede ser atribuible a que se
matriculan ms mujeres en el Mster que hombres aunque la diferencia, por lo menos este
ao, no es tan alta como para arrojar esos porcentajes.
978-84-695-8363-0
1194
La gran mayora de los alumnos encuestados realizan el Mster con la intencin de ser
docentes (87%), mientras que un (2%) no lo hacen por ese motivo, ms bien porque no saben
qu hacer, quedando un (11%) en trmino medio. Es por ello que muchos suelen elegir dicho
Mster para ampliar sus estudios, slo un 21% lo hacen por otros motivos y generalmente
tienen conciencia del Mster, ya que el 62% conoce su existencia aunque suele ser un Mster
bastante recomendado 23%, si bien existe un 15% que no se sabe con exactitud si lo conocan
o se lo recomendaron o las dos cosas a la vez.
Figura 4. Nmero de respuestas de la encuesta sobre el tem El motivo que me ha llevado a elegir
este Mster es porque quiero ser profesor
978-84-695-8363-0
1195
Un motivo de peso por el cual los estudiantes eligen realizar este Mster es porque se
encuentran en situacin de bsqueda de empleo, as lo explicitan claramente el 66%, mientras
que un 17% queda en trmino medio no sabiendo si es porque estaban desocupados o porque
trabajan slo en periodos cortos de tiempo, el resto, es decir, el 17% lo realizan o bien para
cambiar de trabajo o para mejorar en el que ya poseen, ya que algunos imparten docencia en
centros privados.
Figura 5. Nmero de respuestas de la encuesta sobre el tem El motivo que me ha llevado a elegir
este Mster es porque estaba desocupado
La gran mayora de los alumnos conocan la existencia del Mster y pocos dudaron en
realizarlo (72%), ya que slo a un 23% se lo recomendaron.
Figura 6. Nmero de respuestas de la encuesta sobre el tem El motivo que me ha llevado a elegir
este Mster es porque me lo recomendaron
El 60% de los alumnos conocan la oferta formativa de la UMA aunque barajaron otras
posibilidades de msteres no slo de la UMA sino de otras universidades. El 65% de los
alumnos realizan el Mster con las expectativas puestas en que se les ensee a ser profesor y
se les dote de las herramientas necesarias para poder desempear su profesin docente (75%),
aunque un 86% reconoce que lo realiza porque lo necesita para poder acceder a las
oposiciones de Secundaria pero, curiosamente, perciben que dicho Mster no les ayudar a
prepararlas aunque s les dar unas bases y una serie de conocimientos e incluso competencias
docentes para que les sea ms fcil superar ese trmite.
978-84-695-8363-0
1196
Figura 7. Nmero de respuestas de la encuesta sobre el tem Mis expectativas a la hora de elegir
este Mster fueron que me ensearan a ser profesor/a
Figura 8. Nmero de respuestas de la encuesta sobre el tem Mis expectativas a la hora de elegir
este Mster fueron que me permitiera presentarme a las oposiciones
Casi la mitad de los estudiantes encuestados (42%) asegura haber realizado su carrera
universitaria con el objetivo de ser docentes mientras que el resto aseguran que no, o no se
pronuncian al respecto, adems se sienten con vocacin docente (70%). Este hecho no es
singular, dado que hay un mayor porcentaje de alumnos que realizan el Mster cuya principal
salida laboral es la docencia (fillogos, diplomados en lengua extranjera, diplomados en
lengua y literatura, bilogos, matemticos, orientadores...) y as lo explicita el 89%, mientras
que otras carreras ms tcnicas apenas se plantean la docencia como una salida laboral por lo
menos en primera instancia.
978-84-695-8363-0
1197
La gran mayora de los encuestados consideran la docencia como una profesin estable
por sus condiciones laborales y con futuro aunque no a muy corto plazo dadas las
circunstancias del mercado laboral.
Figura 10. Nmero de respuestas de la encuesta sobre el tem La docencia es una profesin estable y
con futuro
Discusin e implicaciones
Como se dijo al principio, esta investigacin es slo la primera parte de una ms
amplia sobre la motivacin que lleva al alumnado del Mster Universitario en Profesorado de
Educacin Secundaria Obligatoria, Bachillerato, Formacin Profesional, y Enseanza de
Idiomas de la Universidad de Mlaga a elegirlo y tras los anlisis realizados podemos concluir
que la gran mayora de los alumnos de dicho Mster tiene vocacin docente e, incluso,
consideran que pueden aprender a ser buenos profesores, ya que se les dota de las
herramientas adecuadas para solucionar los problemas que se les pueden plantear en su
quehacer diario.
Es de destacar el porcentaje tan alto de alumnos que afirman realizar este Mster
porque es el trmite necesario para poder ejercer la docencia en Educacin Secundaria y por
tanto, tengan o no vocacin docente, les abre las puertas de una salida profesional que muchos
consideran estable. As mismo, las expectativas con las que los alumnos comienzan el curso
son principalmente la de que se les den las herramientas necesarias para poder desempear su
labor docente, as como la de poder presentarse a las oposiciones. Segn esto, los objetivos
que nos planteamos al comienzo de esta investigacin se han cumplido porque conocemos los
motivos y las expectativas que tenan los alumnos para realizar el Mster y una mayora tiene
vocacin docente.
Referencias
Esteve, J.M. (2002). El profesorado de secundaria. Hacia un nuevo perfil profesional para
enfrentar los problemas de la educacin contempornea. Revista Fuentes, 3. Sevilla:
Universidad de Sevilla.
Esteve, J.M. (2006). La profesin docente en Europa: perfil, tendencias y problemtica. La
formacin inicial. Revista de Educacin, 340, 19-40.
Fernndez, M. (2006). Los profesores cuentan. Revista de Educacin, 340, 59-65.
978-84-695-8363-0
1198
978-84-695-8363-0
1199
Resum
Quan parlem de convivncia en el context de la present lnia d'investigaci - ens estem
referint a les accions interpersonals positivament interposades en com. La dita afirmaci
adquirix un especial sentit en tots i cada un dels Centres Educatius per la seua clara i
essencial virtualitat formativa. Conseqentment, les relacions considerades intersubjectives,
poden ser classificades de forma negativa o positiva. Per consegent, sense un clima positiu
s impossible efectuar una docncia efica i eficient. A significa apellar per la convivncia
educativa. s per aix que la nostra pretensi en el present estudi no s una altra que la
d'analitzar quins sn les majors conductes disconvivenciales (variables conductuals) - segons
el professorat en actiu - que generen situacions conflictives i conseqentment, al mateix
temps tamb, estudiar algunes de les mesures utilitzades pels docents per a la millora del
clima de desencontre existent actualment en els nostres centres educatius.
Descriptors: Indisciplina, Conflicte, Violncia educacional, Actituds, Mesures pedaggiques.
Abstract
When we talk about the coexistence in' the context of the present line' of investigation we
pixen to the positive interpersonal actions which we share in' common. This statement takes
on special meaning in' each and every one of the Schools for their clear and essential
training' virtuality. Consequently, the intersubjective relations can be classified in' a
negative or positive way. Therefore, without a positive atmosphere is impossible to carry out
a efficacious and efficient teaching. This means to appeal to the educative coexistence. It is
for that reason that our plan in' this present study it is to analyze which are the most
disconventional behavior-according to the active teachers - that they origin difficult
situations and, we also study some of the measures that teachers have used to improve the
atmosphere in' our educative centres.
Keywords: Indiscipline, Conflict, Educational violence, Coexistence, Pedagogical measure.
Introducci
El conflicte en si mateix s un fenomen universal, connatural amb la vida. Els hmens
i dones de totes les societats al llarg de la histria vivim el conflicte des que naixem fins
que morim, i per tant totes les nostres relacions interpersonals es desenvolupen en la mateixa
dinmica. Els conflictes es relacionen amb la satisfacci de les necessitats, amb processos
d'estrs i sensacions de temor. El seu desenrotllament pot desembocar en comportaments
978-84-695-8363-0
1200
agressius i violents (Vinyamata, 2001: 129). Cascn (2002: 47) ho explica exquisidament a
l'afirmar que un conflicte no s un fet puntual; s un procs que t com a origen la
contradicci de necessitats no cobertes, antagniques, que creen problemes; si estos no es
resolen, acaben esclatant amb violncia; es produx la guerra, les crisis, les confrontacions, la
destrucci dels teixits socials. Esta situaci la podem exemplificar amb una bola de neu que es
deixa rodar des de l'alt de la muntanya, amb l'agreujant que baix vivim nosaltres. Qu ocorre
si eludim el problema, si no ho enfrontem? La bola es va fent cada vegada ms gran i, per
tant, ms destructiva, va arrasant tot el que troba al seu pas.
s fonamental per a una adequada gesti del conflicte reconixer els aspectes
emocionals que la potencien: les frustracions, les polaritzacions en auge, les males
percepcions, patologies dels subjectes (Fisas, 2004); aix com els que l'emfatitzen retrica
davant del docent, propaganda entre els grupets primaris, consignes, informaci mediatitzada
o veritats a mitges (Peir, 2006). Per a poder gestionar eficament un conflicte s necessari
conixer la relaci existent entre indisciplina, violncia i conflicte i la dinmica d'escalada que
es configura entre ells. Els problemes de disciplina, junt amb l'ablia sn els comportaments
conflictius ms comuns en els centres educatius. Generen un clima propici per a altres classes
de violncia, sn l'inici d'un cicle de violncies i precursors dels actes delictius ms greus
(Ortigosa, 1996; Debarbieux, 1999).
Si ens referim, en este mateix camp semntic, al concepte o terme de violncia escolar,
haurem de considerar aclaridores les indicacions de Peir (2005) sobre les caracterstiques
especfiques de la violncia escolar. L'espai de la victimizaci s la instituci en qu es
desenrotlla el procs educatiu. Els alumnes, en nombrosos casos sn els autors i les vctimes
de la violncia. Els docents es mostren vulnerables per no gestionar constructivament el
conflicte escolar. El que condux a l'agreujament dels comportaments violents. La funci
social dels adults (docents, mares, pares, personal de maestrana, directius) no s prou
valorada en la societat. Manifesta un escs comproms amb la instituci escolar per part de la
societat. Exemple s la infraestructura edilcia escolar deteriorada i sense manteniment de
moltes escoles pbliques. Es materialitza de diverses formes, predominant les agressions
verbals. Els casos violents si no es resolen adequadament propicien majors violncies, que
enrarixen el clima dels centres desequilibrant els factors de qualitat de les ensenyances.
Afavorix comportaments antisocials que entorpixen el desenrotllament personal i social de la
comunitat educativa.
Si partim del tipus de comportaments que succexen en la instituci educativa, trobem
tamb la classificaci en quatre grans grups que realitza (Peir, 2005):
CLASSE
C
A
R
A
C
T
E
R
S
T
I
Q
U
E
S
978-84-695-8363-0
D'INTIMIDACI
DESAFIA EL
PROFESSOR
Relativa freqncia,
especialment en
l'educaci secundria.
Major incidncia en
centres ubicats en els
afores
Relaci de dominisubmissi.
Robatoris, afanades,
Llei del silenci
En alumnes amb
escs control
emocional i
dificultats en les
habilitats socials
bsiques.
Agressi fsica o
verbal, apatia, no
complir amb les
indicacions del
professorat
ENTORPIX LA
DINMICA DE
CLASSE
Relativa freqncia,
especialment en
l'educaci secundria
Generalment no es
produxen de forma
allada, sin per grups
d'alumnes/a
Impedix reaccionar a
la resta del curs.
Massificaci de la
classe.
Crea desorde.
1201
DE DESTRUCCI
No sn molt freqents.
Sn difcils de
solucionar
Gamberrisme,
vandalisme.
978-84-695-8363-0
1202
978-84-695-8363-0
1203
tcnica escalar de Thurstone i que s tan fiable com esta (Castejn, 2006: 98). L'escala
numrica queda definida explcitament com: 1 (mai), 2 (rares vegades), 3 (a vegades), 4
(quasi sempre) i 5 (sempre).
Resultats
A fi de relacionar els resultats parcials obtinguts - de manera sectorial en cada un dels
nivells educatius -, en funci de les seccions estudiades respecte al qestionari referenciat, i
prenent com a base les mitjanes totals obtingudes de les mostres, realitzarem un contrast entre
la pregunta que ens vam fer a l'inici de la investigaci (descripci general) i la seua relaci
amb els objectius plantejats per al desenrotllament de la mateixa.
P1
5t PRIMRIA
(2 MOSTRES)
6t PRIMRIA
(58 MOSTRES)
ESO
(116 MOSTRES)
MITJA TOTAL
(213 MOSTRES)
P2
P3
P4
P5
P6
P7
P8
1,00 1,00 2,00 1,00 1,00 1,50 1,00 2,00 1,00 1,00 1,50 1,50 1,50 1,00
1,29 1,31 1,86 2,41 1,26 1,47 1,34 2,28 1,45 1,47 1,74 1,34 1,28 1,28
1,31 1,97 1,97 3,10 2,15 1,75 1,88 2,66 2,02 2,45 2,74 1,84 1,78 1,49
1,34 1,76 1,99 2,87 1,90 1,72 1,72 2,54 1,91 2,15 2,44 1,73 1,69 1,48
978-84-695-8363-0
1204
978-84-695-8363-0
1205
978-84-695-8363-0
1206
Resumen
La insercin laboral del pedagogo es una cuestin interesante puesto que conlleva un perfil
multidisciplinar. Aparte de sus tres especialidades: escolar, social y laboral, la figura del
pedagogo es polivalente y sus salidas profesionales muy dispares, lo que puede ser
interesante a la hora de investigar la situacin laboral de estos profesionales en la actualidad
para poder descubrir cmo mejorar su formacin para una mejor salida al mercado laboral.
Para ello se ha realizado una investigacin con seis de las ltimas promociones de
licenciados en Pedagoga de la se obtienen datos acerca de los puestos laborales que ocupan
los licenciados en Pedagoga: su vinculacin con los estudios, las condiciones de
contratacin, tiempo transcurrido entre la finalizacin de los estudios y el acceso a un
empleo relacionado con ellos, etc. Los datos permiten identificar adems la percepcin de la
adecuacin de la formacin obtenida en la universidad, as como la deteccin de lagunas en
su formacin.
Descriptores: Pedagogo, Salidas profesionales, Formacin universitaria.
Abstract
The employment of the pedagogue is an interesting question since it implies a
multidisciplinary profile. Apart from its three specialties: school, social and work, the figure
of the pedagogue is versatile and very different career paths, which can be interesting when
investigating the employment status of these professionals today to discover how to improve
their training for a better start to the labor market. This study was performed at the
University Complutense of Madrid in the last six graduates in Pedagogy promotions where,
through a questionnaire, collect data that provide access to first-hand information about the
jobs that occupy the Bachelor Pedagogy: Linkages with the studies, the conditions of
employment, time between the completion of studies and access to employment related to
them, etc. The data also identify the perception of the adequacy of the training received in the
university as well as the identification of gaps in their training.
Keywords: Pedagogue, Careers, University training.
Introduccin
Desde sus inicios en 1904 en la Universidad Central de Madrid, los estudios de
Pedagoga se han ido extendiendo por toda la geografa espaola, y actualmente,
prcticamente en todas las universidades se imparte el ttulo actual de Grado en Pedagoga. A
978-84-695-8363-0
1207
diferencia de otras titulaciones, en las que las salidas profesionales estn ms claras e incluso
regladas, las de los pedagogos son muchas y, en ocasiones, desconocidas para los propios
titulados. Los estudios de insercin laboral y profesional de los titulados resultan esenciales
para motivar a los futuros pedagogos y poner de manifiesto que es una profesin con futuro.
Adems pueden dar pistas a los estudiantes sobre los puestos que pueden ocupar una vez que
terminen sus estudios, y motivarles de algn modo, al conocer las tasas de empleo de sus
predecesores.
Cuando hablamos de insercin laboral nos referimos tanto a la incorporacin del
titulado a un puesto de trabajo como al mantenimiento del mismo (Fernndez, 1988; Figuera
y Bisquerra, 1992; Prez Escoda, 1996). Dada la actual situacin de crisis econmica y los
altos niveles de paro en Espaa, es preciso considerar que, adems de la dificultad para
encontrar un trabajo, el otro gran problema reside en la capacidad para mantenerlo (Romero et
al., 2004). En trminos generales, la insercin laboral hara referencia a la obtencin de un
trabajo no necesariamente relacionado con la preparacin de la persona, desde este punto de
vista, podra identificarse con la insercin ocupacional. Cuando el puesto est relacionado
con la formacin, se utiliza el trmino de insercin profesional, dado que el concepto
profesin est estrechamente relacionado con el currculum formativo (Homs, 1991; Lpez
Palma, 1996; Prez Escoda, 1996; Prez Escoda y Aneas, 1999). Un estudio concienzudo de
insercin laboral debera incluir adems aspectos relacionados con la calidad de sta:
duracin del contrato, nivel o categora profesional, tipo de ocupacin, nivel de ingresos,
oportunidades de promocin, etc.
A pesar de que los estudios sobre insercin laboral son relativamente recientes,
diversos autores han realizado trabajos y propuestas sobre los factores y variables
intervinientes (Blanch, 1990; Rose, 1991; Priesca, 1991; Arrizabalaga, 1992; Prez Escoda,
1996; Figuera, 1996; Donoso, 2000 y Romero, 2004). Romero et al .(2004) identifican los
factores que condicionan la insercin laboral; su importancia radica en la posibilidad de poder
operar con ellos, de manera que se puedan evaluar, que puedan ser objeto de intervencin y de
seguimiento por parte de los profesionales.
Tabla 1
Factores que condicionan la insercin laboral.
978-84-695-8363-0
1208
Como decimos, han sido varias las experiencias que se han llevado a cabo con el fin
de analizar la situacin laboral de los egresados. En el mbito internacional encontramos
experiencias como El proyecto CHEERS (http://www.uni-kasel.de/wzl/cheers.htm.); o el
proyecto
REFLEX
(http://www.fdewb.unimaas.nl/roa/reflex/index.htm).
Tambin
encontramos otras experiencias en el mbito nacional: el Programa de Calidad Institucional de
la Universidad de Len (1999), Seminario de Mtodos de Anlisis de la Insercin Laboral de
los universitarios (Len, 2003), las XII Jornadas de Economa de la Educacin
(Universidad Carlos III de Madrid, 2003); La Jornada Internacional La transicin al trabajo
de los jvenes graduados europeos (Valencia, 2004), Los trabajos del Centro Andaluz de
Prospeccin (CANP), etc. Todos estos estudios son generales, para todas las titulaciones.
Especficamente para los titulados en Pedagoga encontramos el estudio sobre la
insercin laboral de los graduados la Facultad de Pedagoga de la Universidad de Barcelona,
realizados por el Gabinete de Evaluacin e Innovacin Educativa (Ventura y Martnez, 2007).
En este estudio se realiz el seguimiento a un total de 664 graduados, y las conclusiones eran
alentadoras. La tasa de ocupacin de los titulaos oscil entre el 85% y el 90%. El proceso de
transicin al trabajo se realiz antes de la graduacin para una media del 62% de los
encuestados, un 18% tard menos de seis meses y un 10% ms de un ao. La va de acceso al
mercado laboral ms frecuente fue el ofrecimiento directo a los empleadores (40%), seguida
de los contactos a travs de amigos o conocidos (28%) y de la participacin en
concurso/oposicin (22%). Respecto de las condiciones laborales y la calidad de la insercin,
un 75% de los ocupados, lo estaba en trabajos relacionados con los estudios de Pedagoga. La
mayora de los ocupados tenan contrato de trabajo (90%), siendo un contrato estable para una
media del 47%, e inestable para el 43%; un 5% trabajaba por cuenta propia y otro 5%
trabajaba sin contrato. Los salarios se distribuan en una amplia banda, un tercio de los
ocupados perciba un salario inferior a 100.000 pesetas mensuales, otro tercio perciba entre
100.000 y 150.000, y otro superaba las 150.000 pesetas. Los datos denotaban una rpida
transicin al mercado de trabajo, si bien las vas fundamentales de insercin no coincidan con
las de otras titulaciones, ya que en stas predominaban los canales informales, las redes
personales (amigos, conocidos) para acceder al mercado laboral y no tanto el ofrecimiento
directo a los empleadores como suceda en Pedagoga. En este trabajo, se recogieron tambin
sugerencias de los titulados que coincidan en considerar, como aspecto clave, la formacin
prctica y la necesidad de aproximar el mundo educativo y el laboral. Ms de un 40% de los
encuestados recomendaron incrementar la formacin prctica, no slo en cantidad sino
tambin en calidad.
En 2005, la ANECA realiza la Encuesta de Insercin Laboral, en la que se realiza un
estudio sobre la insercin laboral y profesional de todos los titulados. Para el caso de
Pedagoga, la muestra era nacional y estuvo formada por 469 sujetos. Las principales
conclusiones sealan que el 70% de los licenciados en Pedagoga encuentran trabajo en
menos de un ao, y un 30% en menos de tres meses. Adems la insercin profesional es muy
aceptable, ya que ms del 60% encuentra un trabajo en el que desarrolla funciones
directamente relacionadas con reas educativas. La va de encontrar trabajo
fundamentalmente es a travs de los propios contactos (43%), seguida de la propia
autocandidatura (18%), contactando con los servicios profesionales que puedan estar
interesados en contratar los servicios profesionales de un licenciado en Pedagoga. Segn este
estudio, el tipo de contrato ms frecuente es el temporal (54%) frente al contrato fijo (39%).
El requisito ms solicitado para ocupar el puesto laboral es el de licenciado en Pedagoga
(66%), le sigue el de diplomado con un 28% de los puestos que desempea el profesional de
la educacin. Segn este estudio de la ANECA, las funciones ms desempeadas por los
978-84-695-8363-0
1209
978-84-695-8363-0
1210
relacionados con su formacin, solo el 23,5% afirma estar trabajando en algo que no tiene
relacin con Pedagoga.
El tiempo medio que han tardado en encontrar el empleo actual ha sido de 15,18 meses
(S = 15,8). Para el 24,5% de los licenciados, el trabajo que desempean actualmente es el
primero que han tenido, el 75,5% restante ha tenido otros trabajos antes. La forma en la que
han encontrado el trabajo que desempean actualmente es variable. Destacan sobre las dems
Internet (24,14%), Prcticas previas o trabajo previo (20,69%) y A travs de amistades o
familiares (17,24%). En el caso contrario los medios menos utilizados son Anuncio oficial y
Concurso/oposicin, ambas con un 1,72%.
Casi la totalidad de la muestra, el 89,5% de los sujetos, ha participado en alguna
actividad formativa para completar los estudios una vez terminada la carrera, y la opcin
elegida ha sido mayoritariamente los Cursos o programas de perfeccionamiento (34,2%),
seguidos de Mster o Postgrado Universitario (30,2%), y Seminarios o jornadas (23,7%). En
menor medida ha realizado Ttulo de Experto, Especialista (14,40%); Cursos de Formacin
ocupacional en horario laboral (13,16%); Mster no universitario (10,53%); Otra
licenciatura (10,50%); Cursos de formacin ocupacional (9,21%); Doctorado (6,50%), Otra
diplomatura (5,20%). Un 21,05% afirma haber hecho otra formacin. La influencia de esta
formacin en la bsqueda de un empleo ha sido variable, un 40,8% afirma que ha influido,
mientras otro 40,8% afirma que no lo ha hecho. El 18,4% restante todava no ha concluido
dicha formacin complementaria
Sobre los puestos laborales que ocupan los licenciados en Pedagoga (40 lo han
indicado), hay una gran variedad. El ms repetido ha sido el de tcnico en recursos humanos
(20%), seguido de pedagogo (7,5%) y personal de investigacin en formacin (7,5%). Otros
puestos desempeados por los pedagogos son: direccin de proyectos, direccin del rea
educativa, asesora pedaggica, comercial venta de formacin a empresas, coordinacin de
formacin y administracin de plataforma Moodle, responsable del Departamento Educativo
del Club Deportivo, orientacin socioeducativa y laboral, preparador laboral, consultor
docente, educador social, maestro, educadora, jefe Departamento de Orientacin, Profesora
Ayudante, Pedagoga Teraputica, monitor de refuerzo educativo, monitor de talleres
educativos, cuidador/auxiliar educativo, tcnico de formacin/adolescentes, tcnico de
libertad vigilada, etc.
Solo en el 11,8% de los casos, era imprescindible haber cursado la licenciatura de
Pedagoga para ocupar el puesto que ocupan. Entre los motivos a la hora de aceptar un trabajo
destacan: Oferta interesante (53,8%), Urgencia por trabajar (42,3%) y Buenas perspectivas
profesionales (40,4%). El resto de opciones no superan el 40% de los sujetos siendo el menor
motivo para aceptar el trabajo Compatible con deberes familiares con un 9,6%.
La gran mayora de los sujetos (73,1%) trabaja en el sector privado, mientas que un
15,4% los hace en la empresa pblica y el 11,5% restante lo hace en el tercer sector. El mbito
laboral de los sujetos es el de la empresa en casi la mitad de los casos (40,4%), seguido del
social (25%), escolar (19,2%) y universitario (7,7%). El 7,7% restante afirma pertenecer a
otros mbitos (autnomos, comercio, domstico o deportivo).
El tipo de contrato que tienen los licenciados en Pedagoga es indefinido (no
funcionario) en el 36,5% de los casos, seguido de contratos por obra y servicio (26,9%),
contratos temporales (15,4%), becarios (7,7%), autnomos (5,7%), contratos de formacin
978-84-695-8363-0
1211
(3,8%), y contratos de prcticas (1,9%). El 1,9% restante afirma estar trabajando sin relacin
contractual.
En cuanto a las funciones que desempean los pedagogos en sus puestos de trabajo,
stas no tienen relacin con la Pedagoga en el 17,6% de los casos. Las funciones
desempeadas que tienen relacin con los estudios cursados hacen referencia a recursos
humanos (17,6%), orientacin (15,7%), educacin no formal (11,8%), coordinacin y gestin
(11,8%), docencia (7,8% ), investigacin (7,8%), Pedagoga Teraputica y psicomotricidad
(5,9%) y elaboracin de materiales didcticos (3,9%).
La banda salarial en la que se mueven los sujetos es de hasta 600 en el 90,5% de los
casos, entre 600 y 1200 en el 5,6% de los casos y de entre 1200 y 1800 en el 3,7% restante.
A pesar de esto, el 62,26% afirma estar satisfecho con el sueldo que tiene.
La satisfaccin general con el puesto de trabajo es buena, el 54,7% de los sujetos est
bastante o muy satisfecho con el trabajo que desempea, el 24,5% est satisfecho, y solo el
20,6% est poco o nada satisfecho.
La valoracin que percibe que tienen sus compaeros sobre la figura del Pedagogo en
su trabajo es normal en el 37% de los casos. Los extremos estn bastante igualados, el 28%
percibe una buena valoracin, mientras que el 35% la percibe como mala.
En la muestra encontramos tambin sujetos que actualmente no trabajan, y suponen un
32,8% del total. De ellos, el 72% ha trabajado alguna vez desde que termin la carrera el 72%,
y el 28% restante no ha trabajado nunca. Las personas que actualmente estn sin trabajar,
llevan una media de 10,4 meses buscando trabajo, y si antes trabajaron en algo relacionado
con Pedagoga, lo dejaron porque se acab el contrato (56%) o porque no les gustaba (8%).
El 36% de las personas que actualmente no trabajan, tampoco lo ha hecho nunca en el mbito
de la Pedagoga. El 88% de las personas que no trabajan actualmente est inscrita como
demandante de empleo, pero algo menos la mitad (44%) cobra alguna prestacin por
desempleo.
Respecto a lo que sacrificaran para trabajar, los ms destacados son Ingresos
inferiores a los esperados por formacin y Tareas no relacionadas con los estudios (80% en
ambos casos), seguido de Categora profesional inferior a la esperada con un 79,2%.
Para terminar, se ha preguntado a los sujetos acerca de la satisfaccin con los estudios
cursados, y sta es alta. En general, los sujetos de la muestra, estn contentos de haber
cursado la licenciatura de Pedagoga, ya que el 60% volvera a cursarla (de ellos, la mitad con
total seguridad). El 40% restante, no tiene claro que volviera a cursar esos estudios, de ellos
solo el 13% no lo hara con total seguridad. Fue la vocacin lo que empuj a la mayora
(44,7%) de los licenciados a cursar Pedagoga. Tambin hay un porcentaje bastante elevado
de sujetos (34,2%) que hicieron la carrera porque no pudieron elegir otra, o que no era su
primera opcin. Un 6,6% la hizo pensado que tena buenas expectativas laborales, y otro 6,6%
por influencia del entorno o amistados. El 5,3% lo hizo para completar una formacin que ya
tenan, y el 1,3% restante por otros motivos. En general, se muestran satisfechos con la
preparacin que han tenido en la carrera (si bien es cierto que casi el 90% considera que ha
faltado algo en su formacin). La mayora (43,4%) piensa que la preparacin universitaria ha
sido adecuada, el 18,4% piensa que ha sido bastante o muy adecuada, y un 38,1% piensa que
ha sino poco o nada adecuada. En general, echan en falta ms prcticas a lo largo de la carrera
978-84-695-8363-0
1212
978-84-695-8363-0
1213
978-84-695-8363-0
1214
Resumen
Esta comunicacin presenta un anlisis interpretativo de las principales agencias y agentes
vinculados a la formacin permanente de los agentes escolares de Nivel Medio en la
provincia de La Pampa, Argentina, a partir de la conceptualizacin de campo formulada por
el socilogo Pierre Bourdieu y los aportes de B. Bernstein y M. Daz para abordar los
campos de recontextualizacin oficial y pedaggico. Se realiz un trabajo de entrevistas y
encuestas a referentes de las agencias formadoras y de los agentes escolares del nivel medio
obligatorio. Asimismo se analiz documentacin del campo de la poltica educativa nacional
y provincial. Este avance permite construir las primeras hiptesis sobre las relaciones
jerrquicas en el campo; analizar las posiciones dominantes y las subordinadas ,y por otra
parte, analizar los intentos de autonomizacin del campo de la formacin docente
permanente.
Descriptores: Formacin docente permanente, Campo, Poltica educativa, Agentes.
Abstract
This paper presents an interpretive analysis of the main agencies and agents linked to the
continuing education of teachers of obligatory secondary education in the province of La
Pampa, Argentina, from the field conceptualization made for the sociologist Pierre Bourdieu
and the contribution by B. Bernstein and M. Daz addressing the fields of official and
pedagogical recontextualization.It was made a work of interviews and surveys to referents of
educational agencies and school agencies of obligatory secondary education. Documentation
was also investigated of the national and provincial in education policy field. This advance
allows build the first hypothesis of the hierarchical relationships in the fields; to analyze the
dominant and subordinate positions and moreover, analyze the attempts of field
autonomizacion in the teachers continuing education.
Keyswords: Continuing education, Field, Educacional policy, Agents.
Introduccin
Esta comunicacin se propone llevar a cabo un anlisis interpretativo de los
principales agentes y agencias vinculados con la formacin de los agentes escolares (docentes
y directivos) en ejercicio en el Nivel Secundario (se utiliza indistintamente esa denominacin
o Nivel Medio) en una jurisdiccin de la Repblica Argentina, a partir de categoras tericometodolgicas formuladas por el socilogo P. Bourdieu y aportes de la obra de B. Bernstein.
Se inscribe en el marco de la investigacin doctoral destinada a indagar las posiciones y
978-84-695-8363-0
1215
978-84-695-8363-0
1216
editoriales, desarrolladores de tecnologas, etc., (Martin Criado, 2010). Las relaciones entre
estos diferentes grupos, agencias y agentes, son de compromisos mutuos y/o conflictos que
van generando la dinmica dentro del Campo y en la relacin con otros, en cierto contexto
histrico-social.
Los campos luchan por lograr y mantener una autonoma relativa entre ellos porque
existen relaciones de imposicin de unos sobre otros. Las disputas acontecen para conquistar
mayores espacios de decisin; esta regularidad cobra especificidad en el caso de la educacin
en relaciones de subordinacin con los campos poltico y econmico y de dominacin en
aquellos terrenos donde se juega la posesin de su capital especfico: el cultural (en su doble
condicin de objetivado y en estado incorporado) (Bourdieu, 1994).
Campo de la formacin docente permanente
Dentro del Campo de la Educacin se puede diferenciar un subcampo cuyo objeto son
las prcticas y representaciones sobre el conocimiento necesario para el ejercicio docente en
el Nivel Medio. Estos agentes pueden tener o no cumplimentada la carrera docente inicial o
bien provenir de otras disciplinas profesionales. Se entiende el Campo de la Formacin
Docente Permanente (FDP) como un espacio de relaciones en conflicto entre las agencias y
agentes que regulan los movimientos de textos y prcticas desde el mbito de Produccin al
Campo Pedaggico, espacio de reproduccin de discursos pedaggicos cuyos agentes
construyen sus perspectivas desde la experiencia y prctica en interrelacin con los discursos
y prcticas dominantes que actan sobre los significados, regulando el proceso de
comunicacin y los conocimientos (Diaz, 1995; Bernstein, 2001).
En el espacio de Produccin se producen las posiciones en la teora, la investigacin,
los textos as como las problemticas sobre las cuales versan respecto a la prctica educativa e
interviene de modo parcial (Daz, 1995, p. 5) en la generacin de aquello que circular en el
sistema educativo. Los movimientos de desubicacin y relocalizacin de esos discursos
acontecen dentro de los Campos de Recontextualizacin Oficial y Pedaggico (Bernstein,
2001); cuyas posiciones se diferencian segn sea la relacin de dependencia con el Campo del
Estado.
Dentro del Campo de la FDP las luchas por la imposicin de significados se producen
entonces, entre el Campo de Recontextualizacin Oficial (CRO) cuyos movimientos se
producen dentro del Estado, el Campo de Recontextualizacin Pedaggica (CRP), que intenta
mantener ciertos niveles de autonoma relativa y el Campo Pedaggico (CP), as como al
interior de cada agencia que conforma aquellos espacios, caracterizados por la diversidad
tanto por sus trayectorias institucionales como por la pertenencia de los agentes integrantes.
Campo de
978-84-695-8363-0
Campo recontextualizador
produccin
1217
Campo
pedaggico
CRO
CRP
El Campo de Produccin remite a la categora de Campo Intelectual de la Educacin propuesta por Daz (1995
y 2000).
978-84-695-8363-0
1218
an por fuera de los marcos legales nacionales, motivo por el cual es condicin su aprobacin
para implementar las lneas nacionales en las escuelas medias.
b- El Ministerio de Cultura y Educacin provincial muestra, en las ltimas dcadas, la
intencin poltica de desarrollar los objetivos de FDP fijados en el nivel nacional e intenta
cumplir las prescripciones establecidas. En la dcada de 1990 se adhiri a la Red Federal de
Formacin Docente Continua y en la actualidad incorpora la totalidad de las lneas nacionales,
incluidas las de formacin permanente. Los agentes especializados en reas de educacin que
integran la administracin de las Direcciones de Nivel Medio y de Planeamiento actan desde
su posicin de recontextualizacin de las decisiones polticas adoptadas por las autoridades
polticas provinciales. El cuerpo integrado por personal tcnico (se denomina as a estos
agentes) son los encargados de priorizar discursos, acciones, agentes formadores y
destinatarios, tiempos de realizacin.
El Ministerio Provincial ostenta una posicin privilegiada por detentar capital cultural
y econmico para desarrollar acciones formativas adems de agregar su propio poder como
Estado, autorizado para certificar las acciones de formacin de los docentes y legitimar las
certificaciones que stos presentan para sus legajos anualmente. Sostiene relaciones de
autonoma con las dems agencias jurisdiccionales y con las externas, a quienes contrata
temporalmente para el desarrollo de ciertas acciones formativas imponindoles, de modo ms
o menos negociado, los componentes de la formacin.
c- El Campo de Produccin (o Campo Intelectual de la Educacin) sostiene una
posicin dominante en la definicin de la agenda terico-metodolgica en el medio educativo
en las instancias de formacin y en la fundamentacin de la prctica pedaggica del Campo
Pedaggico. Si bien desde la dcada de 1990 y con mayor acentuacin en estos ltimos aos,
un importante nmero de grupos intelectuales presta sus servicios en tareas de asesoramiento
y/o evaluacin para organismos del Estado, colocndose en una relacin heternoma respecto
a sus propias posibilidades de decisin. Contina la produccin cientfica y/o de textos, entre
otros modos de circulacin del conocimiento, y sera un rea de estudio relevante para
conocer si en esos mbitos se mantiene la autonoma. En el Campo de la Formacin de los
docentes en ejercicio, resulta posible distinguir dos agencias: la Universidad Nacional Local y
las Instituciones de Formacin Docente de Nivel Superior no universitario (ISFD).
d- La Universidad pblica, agencia estatal responsable de la formacin del profesorado
para los distintos niveles de educacin (en el caso que nos interesa porque cubre varios
campos disciplinares de formacin) e investigacin, realiza a travs de los agentes especficos
-docentes investigadores agrupados en unidades acadmicas y/o institutos de investigacindiagnsticos de las reas que requieren de formacin y hace sus propuestas. En estas acciones
pone en juego distintas especies de capital: capital cultural acumulado en las titulaciones de
los agentes, capital social que deviene de sus relaciones con otras universidades y con
especialistas renombrados a quienes puede convocar para ampliar su oferta de formacin, y el
reconocimiento simblico ganado en el campo pedaggico; son estas apuestas las que
construyen la posibilidad de imponer un punto de vista legtimo en el campo de la formacin.
En la lucha simblica dentro del Campo de la FDP, los ttulos y certificaciones de los
agentes universitarios, la acumulacin y el reconocimiento, actan como propiedad simblica
que es usada para distinguirse de los agentes de los Institutos Superiores de Formacin
Docente y de los cuadros tcnicos y polticos de la Administracin Estatal de la educacin;
situndose en posicin de dominacin en el espacio social en cuanto a capital cultural que es
978-84-695-8363-0
1219
978-84-695-8363-0
1220
que esas decisiones. Los agentes escolares necesariamente aceptan la coaccin del nivel
poltico por la dependencia laboral y, por lo tanto, respetan las reglas y recurren
habitualmente al mercado de la formacin si necesitan ingresar o mejorar su posicin en la
carrera.
La autoridad acadmica de la universidad no recibe el mismo nivel de aceptacin,
reconocen legitimidad por las credenciales y el capital cultural acumulado de los agentes al
igual que a los Institutos Superiores Estatales (colocados en segundo lugar) pero muestran su
disgusto por las condiciones de las convocatorias: escasas, poco difundidas, das y horarios
inconvenientes. Es controvertido el lugar que asignan al gremio, aunque mayormente critican
sus acciones por el alineamiento poltico con el gobierno central, por cerrar sus acciones a los
afiliados y principalmente por no imponer otro estatuto a la formacin docente en su lucha
sindical ante el Estado; algunas escasas voces reconocen la saturacin de demandas que trata
de conciliar esta agencia.
Para seguir avanzando
A partir de esta primera tarea de identificacin de agencias y agentes y las posiciones
ocupadas a partir de sus capitales especficos, es posible construir conocimiento de la
dinmica de las luchas por los lugares privilegiados.
En una lnea de continuidad con lo acontecido desde hace varias dcadas en el pas, los
agentes -formadores y en formacin- por la situacin socioeconmica vivida recurren al
pluriempleo; motivo por el cual masivamente ocupan posiciones en varias agencias al mismo
tiempo: Estado-universidad, universidad-escuelas, Estado-escuelas, universidad-Institutos
Superiores, etc. Saturacin laboral con varias consecuencias; una de ellas es que
analticamente impide mostrar un comportamiento homogneo de las agencias si bien se
pueden marcar tendencias definidas; otra observacin que surge es la diversidad de posiciones
entre grupo de formadores y en formacin, en algunas acciones los agentes formadores pasan
a ser los sujetos en formacin y hasta de la misma agencia, por ejemplo, aquellos que se
desempean en la universidad o en Institutos Superiores o en ambas. La tercera consecuencia
refiere a la situacin de los agentes del Campo Pedaggico del Nivel Medio, matizada por un
cruce de posiciones diferenciadas y opuestas sobre la implementacin de la obligatoriedad de
dichos estudios, que los est llevando a relegar su formacin por las condiciones de
sobreexigencia laboral y por las situaciones institucionales generadas ante la extrema
diversidad y desigualdad de los alumnos, que deben atender sin ayuda estatal complementaria
y sin decisiones estructurales sobre los modos de organizacin escolar y del trabajo
pedaggico.
Las agencias y agentes formadores del Campo de la FDP establecen una paradoja en la
relacin que mantienen con el Estado provincial que financia y certifica las acciones
realizadas, valga aclarar que la universidad cuenta con autoridad para certificar su formacin.
Las agencias, excluido el Ministerio por su papel poltico regulador dominante, optan por
entrar en el campo de la FDP en una situacin de competencia por recursos econmicos y
simblicos; por lo cual, los propsitos y valores asignados a la formacin pueden ser
definidos por las exigencias requeridas por el organismo contratante: responder a pedidos
especficos tal como las temticas del momento o los requerimientos de las agencias polticas
o la relacin costo/eficiencia. Desde su percepcin, si bien sta es la situacin objetiva,
reconocen que mantienen cuotas de autonoma en las cuales imprimen sus propias lgicas
acerca del conocimiento y el modo de trasmisin privilegiado en las acciones formativas.
978-84-695-8363-0
1221
Ya para cerrar, una hiptesis en exploracin refiere a las agencias del Campo de
Recontextualizacin Pedaggica que confluyen en este campo de FDP. Habra una
disminucin de su autonoma por la imposicin de regulaciones estatales que avanzan en
distintos terrenos y porque dependen cada vez ms de la provisin del financiamiento
asociado a los planes y programas del Estado. Esta tendencia fue observada en la dcada de
1990 por la investigacin de Serra (2004) y Graizer y de Marinis (2004).
Referencias
Bernstein, B. (2001). La estructura del discurso pedaggico: clases, cdigos y control (vol.
IV). Madrid: Morata.
Bourdieu, P. (1988). Cosas dichas. Buenos Aires: Gedisa.
Bourdieu, P. (1994). El campo cientfico. Redes: Revista de estudios sociales de la ciencia,
1(2), 131-159.
Bourdieu, P. (1997). Las reglas del arte. Gnesis y estructura del campo literario. Barcelona:
Anagrama.
Bourdieu, P. (1998). Capital cultural, escuela y espacio social. Mxico: Siglo XXI.
Bourdieu, P. y Wacquant, L. (1995). Repuestas por una antropologa reflexiva. Mxico:
Grijalbo.
De Marinis, P. y Graizer, O. (2004, agosto). Tecnologas de gobierno de la educacin y
recontextualizaciones locales (un ensayo de sociologa de la transformacin
educativa). Ponencia presentada en la Conferencia Internacional de Sociologa de la
Educacin (ISA). Buenos Aires, Argentina.
Daz, M. (1995). Aproximaciones al campo intelectual de la educacin. En J. Larrosa
(Comp.), Escuela, Poder y Subjetividad (pp. 333-366). Madrid: La Piqueta.
Daz, M. (2000). Hacia una Sociologa del Discurso Pedaggico. Aproximacin inicial.
Bernstein y la pedagoga. Mimeo.
Goetz, J. y Le Compte, M. (1988). Etnografa y diseo cualitativo en investigacin educativa.
Madrid: Morata.
Gutirrez, A. (2002) Problematizacin de la pobreza urbana. Tras las categoras de Pierre
Bourdieu. Cuadernos de Antropologa Social,15, 9-27.
Martin Criado, E. (2010). La escuela sin funciones. Crtica de la sociologa de la educacin
crtica. Barcelona: Bellaterra.
Serra, J. C. (2004). El Campo de la capacitacin docente. Polticas y tensiones en el
desarrollo profesional. Buenos Aires: Mio y Dvila.
Taylor, S. y Bogdan, R. (2000). Introduccin a los mtodos cualitativos de investigacin.
Buenos Aires: Paids.
978-84-695-8363-0
1222
Resumen
El objetivo principal de este estudio se centra en averiguar los factores que dependen de la
motivacin de la demanda de los usuarios de formacin continua en las Instituciones de
Educacin Superior Espaolas. La investigacin se enmarca en el paradigma positivista
utilizando metodologa hbrida y como instrumentos, las entrevistas en profundidad y un
cuestionario. La muestra obtenida contiene 510 casos cuyo tratamiento inicial fue un anlisis
factorial exploratorio para determinar las variables directamente observables recogidas en el
cuestionario que contribuyen a medir los factores. Seguidamente se realiz un anlisis
factorial confirmatorio y posteriormente se introdujo el modelo estructural, mediante una
nueva variable latente exgena que aglutina los constructos de primer nivel. Como resultado
obtuvimos los principales factores determinantes en la motivacin de los estudiantes de
formacin continua, as como sus indicadores de medicin. Estos factores son: el empleo
actual, la necesidad de un cambio profesional y la necesidad de una mejora personal.
Descriptores: motivacin, formacin continua, factores, anlisis factorial exploratorio y
confirmatorio, ecuaciones estructurales.
Abstract
The aim of this study is to determine the main factors influencing the users motivation
demand for continuous training in the Spanish Higher Education Institutions. This research is
developed under the positivist, using an hybrid methodology. The instruments employed are:
in-depth interviews and a questionnaire. The sample of this study consists of 510 survey
responses which were initially treated with an exploratory factor analysis to determine the
directly observable variables in the questionnaire which contribute to measure factors. Then
we conducted a confirmatory factor analysis and next the structural model was introduced by
a new exogenous latent variable that brings together top-level constructs. We got the main
factors in motivation of lifelong learners as wells as their measuring indicators. These factors
are: current employment, the need for a career change and the need for personal
improvement.
Keywords: motivation, lifelong learning, factors, exploratory and confirmatory factor
analysis, structural equation.
978-84-695-8363-0
1223
Introduccin
La formacin y la seleccin de una profesin no constituyen un acto decisivo ni nico
para toda la vida, sino un proceso continuo. En este contexto surge con fuerza el concepto de
aprendizaje a lo largo de la vida (lifelong learning). El aprendizaje permanente ha ocupado
durante la ltima dcada, un lugar destacado en la agenda poltica europea de cooperacin
para la educacin y la formacin. Los ministros de la Unin Europea, convencidos de su
importancia, acordaron que en el 2020, al menos el 15% de los adultos debera estar
recibiendo algn tipo de formacin y educacin (Eurydice network, 2011).
Para realizar el estudio, primero realizamos entrevistas en profundidad a expertos en
formacin de adultos que junto con el estudio del marco terico de referencia, nos permiti
extraer una serie de variables que influyen en las motivaciones para el aprendizaje
permanente. La siguiente tabla relaciona variables que hemos tenido en cuenta en este trabajo,
con los autores que las mencionan en sus estudios.
Tabla 16
Variables-autores
VARIABLES
Mejorar la formacin cultural
AUTORES
(Boateng, 2009), (Findlay, Findlay, & Warhurst, 2011), (Hoy, 1933), (Heath,
1963), (Humberside College of Higher Education, 1988), (White, 1978)
citados en (Quesada, Pineda-Herrero, Espona, Ciraso, & Stoian, 2011),
(Young, 1980)
(Boateng, 2009), (Findlay et al., 2011), (Noe, 1986), (Pineda, 2008)
(Carnoy, 2006), (Findlay et al., 2011), (Monslvez et al., 2008)
(Boateng, 2009), (Findlay et al., 2011), (Heath , 1963), (Hoy, 1933),
(Humberside College of Higher Education, 1988), (Instituto Nacional de
Estadstica), (White, 1978) citados en (Quesada et al., 2011), (Young, 1980)
(Arulampalam, Booth, & Bryan, 2004), (Barker, 2011), (Boateng, 2009),
(Instituto Nacional de Estadstica),
(Boateng, 2009), (Barker, 2011), (Findlay et al., 2011), (Instituto Nacional de
Estadstica), (Naquin & Holton, 2002), (Naquin & Holton, 2003),
El estudio del marco terico permiti observar que la mayora de trabajos consideran
la formacin continua desde la perspectiva de la organizacin y son pocos los que tratan el
punto de vista del demandante de dicha formacin. El reto de nuestro trabajo se centr en la
obtencin de resultados empricos, precisamente desde el anlisis de las causas que motivan a
los estudiantes a realizar formacin continua.
El objetivo de este estudio consisti en averiguar los factores que dependen de la
motivacin de la demanda de los usuarios de formacin continua en las Instituciones de
Educacin Superior Espaolas.
Mtodo
Se trata de una investigacin basada en el paradigma positivista donde hemos utilizado
metodologa hbrida. Los principales instrumentos del estudio han sido las entrevistas en
profundidad (metodologa cualitativa) y el cuestionario (metodologa cuantitativa). Una vez
978-84-695-8363-0
1224
completado el estudio del marco terico y habiendo realizado las entrevistas en profundidad a
expertos en formacin continua, elaboramos el primer cuestionario. Su validez de contenido
se comprob mediante un juicio de expertos y una prueba piloto. Nos permiti probar la
fiabilidad del instrumento comprobando la consistencia interna y la validez de constructo
(Sabri, Llinas, Isus, & Yez, 2012, Julio).
Tabla 17
Ficha tcnica del estudio
Poblacin
Instrume nto
Muestra
Nivel de confianza
Varianza
Error mximo
Recogida
Una vez obtenidos los datos seguimos el siguiente proceso metodolgico: realizacin
del anlisis exploratorio de los datos; del anlisis factorial exploratorio (acrnimo AFE a
partir de ahora); obtencin de los factores; evaluacin del anlisis factorial confirmatorio
(acrnimo AFC a partir de ahora); elaboracin y evaluacin del modelo.
Anlisis exploratorio de los datos
La muestra estudiada presenta las siguientes caractersticas: gnero: un 50% de
hombres y un 50% de mujeres; nivel de estudios: el 95% tiene titulacin universitaria, un
46% de primer ciclo y un 49 % de segundo ciclo; edad: media=31,10 aos; desviacin
tpica=7,27 aos; situacin laboral: el 61% de los encuestados estn trabajando; un 43% en
empresas pblicas, un 70% en privadas y un 6% son autnomos; el 20% est en paro y un
19% son estudiantes con dedicacin exclusiva.
Anlisis factorial exploratorio (AFE)
Evaluamos la existencia de correlacin entre las variables, mediante el contraste de
esfericidad de Barlett (1347,565), y la medida KMO de adecuacin muestral global al modelo
factorial (0,737) superior al valor mnimo de 0,5 (Hair, Anderson, Tatham, & Black, 1999).
Estos resultados confirman la posibilidad de realizar el AFE. Obtuvimos tres factores que
representan el 73% de la varianza explicada. La tabla siguiente muestra los factores as como
las variables relacionadas con el constructo motivacin; entre parntesis se muestra el peso de
cada variable en el factor:
Tabla 18
Resultados del anlisis factorial exploratorio
Mantener
el empleo
(0,845)
978-84-695-8363-0
1225
La tabla siguiente muestra los valores de la evaluacin del ajuste global del modelo.
Los resultados cumplen los valores de referencia.
Tabla 19
Resultados del ajuste global del modelo del AFC
Bondad ajuste
Incrementales
Parsimonia
MDN
GFI
RMSEA
AGFI
IFI
CFI
0,966
0,968
0,064
0,932
0,918
0,916
3,099
Valores de referencia
>0,9
> 0,9
<0,08
> 0,9
1<
<5
CAIC
CN
190,142
267
200
978-84-695-8363-0
1226
978-84-695-8363-0
1227
Incrementales
GFI
RMSEA
AGFI
0,950
0,958
0,074
0,917
>0,9
> 0,9
<0,08
> 0,9
IFI
Parsimonia
CFI
0,905 0,902
2,721
Valores de referencia
1
<
<5
CAIC
CN
170,348
201
200
Para estudiar el ajuste del modelo de medida procedimos de manera anloga al AFC.
La nica saturacin que no supera el valor mnimo es la correspondiente al constructo
motivacin con el constructo mejora personal. Continuamos realizando el estudio para
comprobar los otros valores antes de eliminar la relacin.
Una vez hubimos comprobado el modelo de medida procedimos a comprobar el
modelo estructural que establece relaciones causales entre los constructos. Realizamos su
evaluacin comprobando: las cargas factoriales de segundo nivel y la proporcin de varianza
978-84-695-8363-0
1228
explicada por la variable latente. La carga factorial entre el factor trabajo actual y motivacin
es 0,638, supuso un 41% de la varianza explicada. La carga entre cambio profesional y
motivacin es 0,969 y equivale a un 94% de la varianza explicada. Los dos casos superan el
valor umbral del 30% (Barclay et al., 1995; Jreskog & Srbon 1993). La menor carga la
obtuvimos entre el factor mejora personal y motivacin con un valor de 0,178 equivalente a
un 3% de la varianza explicada. Sin embargo la razn crtica entre las variables es alta de 2,18
y en este caso segn el criterio de Varela et al. (2006) si la razn crtica es elevada puede
mantenerse la relacin entre los factores.
Una vez hemos comprobado nuestro modelo de medida y estructural mostramos los
resultados del mismo expresados matricialmente:
978-84-695-8363-0
1229
personal. Tienen pendiente positiva con valores comprendidos entre 0,61 y 0,80. Todos los
indicadores son altamente dependientes de su factor.
Los factores o variables latentes: trabajo actual, cambio profesional y mejora personal
dependen linealmente del constructo motivacin. El primero de ellos tiene una pendiente de
0,64, el segundo de 0,97 y el tercero de 0,18.
Estos resultados permiten afirmar que para los estudiantes de formacin continua de
las Instituciones de educacin Superior de Espaa, los factores que dependen de la motivacin
son, ordenados de mayor a menor dependencia lineal: realizar un cambio profesional,
mantener el trabajo actual (ambos altamente dependientes) y en menor medida alcanzar
una mejora personal.
Una limitacin de este estudio es que se ha realizado nicamente en Espaa.
Entendemos que podra ser la base de la elaboracin, confirmacin y validacin de un posible
modelo de factores influyentes en la motivacin en la demanda de los usuarios de formacin
continua. Creemos que para poder realizarse debera distribuirse el mismo instrumento en
diferentes pases y realizar un anlisis multigrupo de los datos obtenidos. Otra posibilidad
sera recoger datos de las distintas comunidades autonmicas espaolas y realizar el estudio
individual y multigrupo del modelo propuesto. Sus resultados pueden ser tiles a gestores y
directores de programas de formacin continua para elaborar su oferta de acuerdo con los
deseos de los usuarios.
Referencias
Arulampalam, W., Booth, A. L. y Bryan, M. L. (2004). Training in Europe. Journal of the
European Economic Association, 2(2-3), 346-360.
Barclay, D., Higgins, C., y Thompson, R. (1995). The partial least squares (PLS) approach to
causal modeling: personal computer adoption and use as an illustration. Technology
studies, 2(2), 285-309.
Barker, C. (2011). Embedding learning from formal training into sustained behavioural
change in the workplace. Adelaida: NCVER.
Boateng, S. K. (2009). Significant country differences in adult learning. Disponible en:
http://epp.eurostat.ec.europa.eu/cache/ITY_OFFPUB/KS-SF-09-044/EN/KS-SF-09-044EN.PDF
Bollen, K. A. (1989). Structural equations with latent variables. New York: John Wiley &
Son.
Carnoy, M. (2006). Economa de la Educacin. Barcelona: Editorial UOC.
Eurydice network. (2011). Adults in formal education: policies and practice in Europe.
Bruselas: Education, Audiovisual and Culture Executive Agency.
Findlay, J., Findlay, P. y Warhurst, C. (2012). What every worker wants? Evidence about
employee demand for learning. British Educational Research Journal,38(3), 515-532.
978-84-695-8363-0
1230
978-84-695-8363-0
1231
Resumen
Las Tecnologas de la Informacin y de la Comunicacin (TIC) junto con las estrategias de
aprendizaje constituyen dos pilares en la universidad. Dentro de las TIC, las Competencias
Pedaggicas son un elemento clave en la formacin de los estudiantes. Asimismo, las
Estrategias de Aprendizaje son centrales para un aprendizaje autorregulado por parte del
estudiante. El propsito de este trabajo es establecer relacin entre las Competencias
Pedaggicas y las Estrategias de Aprendizaje. Para ello se ha utilizado un diseo de
encuesta, cuya muestra la constituyen 558 estudiantes de Magisterio de la Universidad
Catlica de Valencia, utilizndose dos cuestionarios: Innovatic y CEVEAPEU. Los resultados
apuntan la existencia de dos grupos en relacin con la competencia pedaggica, as como se
ha encontrado una relacin entre estos dos grupos y las Estrategias de Aprendizaje. Por lo
tanto, las universidades han de fomentar las competencias pedaggicas en TIC para
incrementar las estrategias de aprendizaje en sus estudiantes, especialmente en aquellos que
sern futuros docentes.
Descriptores: Competencias pedaggicas en TIC, estudiantes magisterio, Estrategias de
aprendizaje.
Abstract
The Information and Communication Technologies (ICT) along with learning strategies are
two pillars in Higher Education. Within ICT, the Pedagogical Competences are a key element
in the training of students. Also, Learning Strategies are central to self-regulated learning
from the student. The purpose of this paper is to establish relationship between Pedagogical
Competences and Learning Strategies. For this we have used a survey design, with a sample
of558 students of Teacher at the Universidad Catlica de Valencia, using two questionnaires:
Innovatic and CEVEAPEU. The results suggest the existence of two groups regarding
pedagogical competence and found a relationship between these two groups and Learning
Strategies. Therefore, universities should encourage ICT teaching skills to increase learning
strategies in their students, especially those who will be future teachers.
Keywords: ICT Pedagogical Competences, student teacher, learning strategies.
978-84-695-8363-0
1232
Introduccin
La universidad espaola y europea, en el ltimo decenio, se han enfrentado a nuevos
desafos como consecuencia del proceso de Bolonia. El papel del alumnado ha pasado a tener
un rol central, donde su aprendizaje se convierte en un aspecto importante. Adems, las
Tecnologas de la Informacin y de la Comunicacin (TIC) se han constituido en un elemento
esencial para conseguir dicho aprendizaje del alumnado universitario.
En la ltima dcada la irrupcin de las TIC en la educacin ha supuesto cambios tanto
en el profesorado-con un papel clave para la integracin de estos recursos educativos- como
en el alumnado - como coadyuvante en el desarrollo integrador de estas tecnologas en el
proceso de enseanza aprendizaje-. Un elemento fundamental para la incorporacin de estos
recursos tecnolgicos son las competencias que demuestren en ellos, pues como apuntan
Surez, Almerich, Gargallo y Aliaga (2010) el mayor dominio de estas implica un mayor uso
de los recursos tecnolgicos, tanto personal-profesional como con el alumnado, por parte del
profesorado. A lo largo de los ltimos aos, se han definido diferentes marcos competenciales
en TIC para el alumnado, como el desarrollado por la International Society for Technology in
Education (ISTE, 1998, 2007) o el propuesto por Arrs, Torres y Garca-Valcrcel (2011).
Asimismo, en torno a la figura del profesorado se han diseado marcos competenciales, como
las propuestas de la UNESCO (2008) o el ISTE (2008). No obstante, una de las problemticas
en ambos colectivos ha sido la definicin explcita de marcos competenciales. SurezRodrguez, Almerich, Daz-Garca y Fernndez-Piqueras (2012) y Surez-Rodrguez,
Almerich, Gargallo y Aliaga (2013) han establecido que las competencias en TIC para el
profesorado se pueden dividir en dos conjuntos: competencias tecnolgicas y competencias
pedaggicas. Este mismo esquema competencial se puede trasladar al alumnado definiendo
ambos conjuntos: tecnolgicos conocimiento y habilidad que presenta el alumnado en los
recursos tecnolgicos- y pedaggico conocimiento y habilidad que presenta el alumnado en
el uso de estos recursos en su aprendizaje. Por otra parte, el aprendizaje estratgico del
alumnado universitario cobra una importancia esencial por su vinculacin con el aprender a
aprender y mxime en la Sociedad del Conocimiento (Gargallo, 2012). Este aprendizaje
estratgico es un concepto ligado a la responsabilidad y autonoma del alumnado (Gargallo,
2012). A lo largo del tiempo, el concepto de estrategias del aprendizaje ha ido evolucionando
desde los aspectos cognitivos y metacognitivos, hasta integrar elementos afectivomotivacionales y de apoyo (Gargallo, Sarez-Rodrguez, y Prez-Prez, 2009).Estos autores
definen las estrategias de aprendizaje como el conjunto organizado, consciente e intencional
de lo que hace el aprendiz para lograr con eficacia un objetivo de aprendizaje en un contexto
social dado (p. 2). En las estrategias de aprendizaje se incluyen tres aspectos (Gargallo et al,
2009):aspectos afectivo-motivacionales y de apoyo; aspectos metacognitivos; y aspectos
cognitivos. El objetivo del presente estudio es conocer la relacin entre las competencias
pedaggicas del alumnado que estudia magisterio y sus estrategias de aprendizaje desde una
perspectiva multivariada.
Mtodo
El diseo de estudio utilizado es un estudio de encuesta de tipo transversal. La
muestra est constituida por 558 estudiantes de Magisterio de la Universidad Catlica de
Valencia de distintas especialidades, cuyas caractersticas definitorias esenciales se
encuentran en la Tabla 1. El tipo de muestreo utilizado es un muestreo de cuotas,
estableciendo como criterios las diferentes especialidades y el curso.
978-84-695-8363-0
1233
Tabla 1
Caractersticas de la muestra
Gnero
Edad
Disponibilidad de ordenador en casa
Disponibilidad de Internet en casa
Especialidades
Chicas: 82,8%
Chicos: 17,2%
Edad media: 23,1
Rango: 18-58
S: 99,8%
No: 0,2%
S: 96,5%
No: 3,5%
Infantil: 40%
Primaria: 31,1%
Otras especialidades:(28,9 %)
Educacin Fsica: 4,1%
Educacin Musical: 8,8%
Educacin Especial: 5,6%
Audicin y lenguajes: 1,6%
Lengua extranjera: 8,8%
Denominacin
CP_BI
CP_TP
CP_Com
CP_GI
CP_COL
CP_ET
978-84-695-8363-0
1234
Tabla 3
Estrategias de aprendizaje
Motivacin intrnseca (MOTINT)
Valor de la tarea (VALTAR)
Atribuciones externas (ATREXT)
Autoevaluacin (AUTOEV)
Conocimiento de objetivos y criterios de evaluacin
(CONOBJ)
Control- autorregulacin (CTLAUTRG)
Habilidades de interaccin social y aprendizaje con
compaeros (HABIS)
Ansiedad (ANS)
El anlisis de datos, obtenidos mediante el programa SPSS 19.0, que se han realizado
son anlisis de conglomerados, MANOVA y ANOVA. El procedimiento de recogida de la
informacin se ha llevado a cabo en el segundo cuatrimestre del curso 2009-10, mediante
cuestionarios en papel.
Resultados
El perfil de los estudiantes de Magisterio, obtenido mediante el anlisis de
conglomerados, a partir de las seis dimensiones de la competencia pedaggica son dos grupos
claramente diferenciados -alta y baja competencia-. El primer grupo supone el 62,4% de la
muestra, mientras que en el grupo de baja competencia pedaggica el porcentaje es el 37,6%.
Los estudiantes de Magisterio del grupo de competencia alta -ver grfico 1- se
caracterizan por contemplar en sus tareas acadmicas la bsqueda de informacin, la
utilizacin de las TIC para la realizacin de sus trabajos, los recursos tecnolgicos para la
comunicacin en su actividad acadmica y la gestin de la informacin para la elaboracin de
sus trabajos. En menor medida, y en ocasiones, consideran en sus tareas acadmicas la
colaboracin mediante las TIC con otros compaeros o grupos y las cuestiones ticas. En
cuanto al grupo de estudiantes de competencia baja, su patrn es semejante al anteriormente
expuesto, pero con unos valores medios inferiores al grupo de competencia alta.
978-84-695-8363-0
1235
Bajo
Alto
1
CP_BI
CP_TP
CP_COM
CP_GI
CP_COL
CP_ET
Grfico 1. Perfiles de los estudiantes de Magisterio en los dos grupos segn su nivel de Competencia
Pedaggica
Significacin
,000
,000
,000
,000
,000
,000
978-84-695-8363-0
1236
Grfico2. Perfiles de los estudiantes de Magisterio en las estrategias de aprendizaje en funcin de los
dos grupos de Competencia Pedaggica
Tabla 5
Pruebas de los efectos inter-sujetos de las dimensiones de las estrategias de aprendizaje
entre los grupos de Competencia Pedaggica
Dimensiones de estrategias de
aprendizaje
MOTINT
MOTEXT
VALTAR
ATRINT
ATREXT
AUTEXP
AUTOEV
PLAN
CONOBJ
INTMOD
CTLAUTRG
CTLCTX
HABIS
ESFIAN
ANS
CFBI
SELINF
F
1,830
96,234
,728
,932
,800
11,620
6,935
92,880
119,236
10,679
86,598
12,148
10,856
45,467
18,171
103,955
74,263
Significacin
,177
,000
,394
,335
,371
,001
,009
,000
,000
,001
,000
,001
,001
,000
,000
,000
,000
Eta al cuadrado
parcial
,004
,166
,001
,002
,002
,023
,014
,161
,197
,022
,152
,024
,022
,086
,036
,177
,133
ELABINF
ADQINF
ORGINF
PERCRE
ALMSR
ALMMEM
MANREC
TRAUSOINF
978-84-695-8363-0
4,440
227,375
17,438
64,242
18,681
42,027
86,074
5,454
,036
,000
,000
,000
,000
,000
,000
,020
1237
,009
,319
,035
,117
,037
,080
,151
,011
Discusin
Los resultados obtenidos en los estudiantes de magisterio de la muestra apuntan un
nivel medio en sus competencias pedaggicas, en relacin con las TIC. Esto implica
contemplarlas en sus tareas acadmicas en algunas ocasiones, presentando un nivel menor en
la colaboracin con otros estudiantes y en las cuestiones ticas. Estos resultados coinciden en
parte con los obtenidos por Arrs et al. (2011), sobre todo en relacin con las limitaciones en
cuanto a las competencias de colaboracin. Se han encontrado dos grupos claramente
diferenciados en funcin de la competencia pedaggica. Uno con un dominio alto y el otro
con uno bajo. Ambos grupos presentan el mismo patrn que se acaba de sintetizar en el
prrafo anterior, si bien se ha de destacar que el grupo alto presenta un nivel en torno a la
consideracin de estas competencias casi siempre en sus tareas acadmicas. Adems, el
conjunto del perfil (MANOVA) seala una clara separacin entre los grupos y explica una
parte muy relevantes de las diferencias. Respecto a la relacin entre las competencias
pedaggicas y las estrategias de aprendizaje se ha obtenido un nivel alto, teniendo en
consideracin el tamao del efecto. Esto implica que un mayor dominio en las competencias
pedaggicas en TIC supone unas mejores estrategias de aprendizaje. Adems estas diferencias
se han centrado fundamentalmente en los aspectos afectivos, metacognitivos y cognitivos, y
menos en los motivacionales, pues nicamente se ha encontrado una diferencia en la
motivacin extrnseca. Consiguientemente, el dominio de las competencias pedaggicas va a
suponer un incremento de las estrategias de aprendizaje en el estudiante. Por ello, es
fundamental fomentar las competencias pedaggicas en TIC para los estudiantes en general
pero, muy especialmente, atender a los futuros profesionales de la Educacin desde su
formacin inicial.
Referencias
Arras, A. M. G., Torres, C. A. y Garca-Valcrcel, A. (2011). Competencias en Tecnologas
de Informacin y Comunicacin (TIC) de los estudiantes universitarios. Revista Latina de
Comunicacin Social, 66, 130-152. doi: 10.4185/RLCS-66-2011-927-130-152
Gargallo Lpez, B. (2012). Un aprendiz estratgico para una nueva sociedad. Revista Teora
de la Educacin: Educacin y Cultura en la Sociedad de la Informacin, 13(2), 246-272.
Disponible
en
<http://campus.usal.es/~revistas_trabajo/index.php/revistatesi/article/view/9008/9252>
Gargallo, B., Surez, J. y Prez, C. (2009). El cuestionario CEVEAPEU. Un instrumento para
la evaluacin de las estrategias de aprendizaje de los estudiantes universitarios.
RELIEVE,
15,
1-31.
Disponible
en <http://www.uv.es/RELIEVE/v15n2/RELIEVEv15n2_5.htm>
978-84-695-8363-0
1238
ISTE (1998). NETS for students: National educational technology standards for students.
International
society
for
technology
in
education.
Disponible
en
<http://www.iste.org/docs/pdfs/nets_for_students_1998_standards.pdf?sfvrsn=2>
ISTE (2007). NETS for students: National educational technology standards for students.
International
society
for
technology
in
education.
Disponible
en
<http://www.iste.org/docs/pdfs/nets-s-standards.pdf?sfvrsn=2>
ISTE (2008). NETS for teachers: National educational technology standards for teachers.
International
society
for
technology
in
education.
Disponible
en
<http://www.iste.org/docs/pdfs/nets-t-standards.pdf?sfvrsn=2>
Surez, J., Almerich, G., Gargallo, B. y Aliaga, F. (2010). Las competencias en TIC del
profesorado y su relacin con el uso de los recursos tecnolgicos. Education Policy
Analysis
Archives,
18,
1-32.
Disponible
en
<http://epaa.asu.edu/ojs/article/viewFile/755/832>
Surez-Rodrguez, J.M.,Almerich, G., Daz-Garca, I. y Fernndez-Piqueras, R. (2012).
Competencias del profesorado en las TIC. Influencia de factores personales y
contextuales. Universitas Psychologica, 11(1), 293-309.
Surez-Rodrguez, J., Almerich, G., Gargallo, B. y Aliaga, F. (2013). Las competencias del
profesorado en TIC: estructura bsica. Educacin XX1, 16, 39-62. doi:
10.5944/educXX1.16.1.716.
UNESCO (2008). Normas UNESCO sobre Competencias en TIC para Docentes. Disponible
en <http://cst.unesco-ci.org/sites/projects/cst/default.aspx>
978-84-695-8363-0
1239
Resumen
Las Competencias Tecnolgicas respecto a las TIC siguen siendo un elemento clave en la
formacin de futuros profesionales de la Educacin. La situacin ha ido variando en el
ltimo decenio tanto para los profesores como para los estudiantes en formacin inicial como
profesores. No obstante, siguen existiendo evidencias sobre algunas carencias respecto a las
competencias necesarias para encarar la situacin actual y futura. En su formacin inicial,
lo profesores muestran perfiles estables en su nivel de adquisicin de estas competencias.
Estos grupos muestran asimismo una relacin consistente con las perspectivas sobre la
educacin, de modo que a mayor nivel de competencia tecnolgica se tiene mayor inclinacin
hacia una enseanza-aprendizaje basada en una perspectiva constructivista.
Descriptores: Competencias tecnolgicas en TIC, estudiantes magisterio, Perspectivas sobre
educacin.
Abstract
Technological Competencies in ICT remain a key element in the training of future education
professionals. This situation has been changing in the last decade, both for teachers and for
students in initial training as teachers. However, there are still evidence of some
shortcomings regarding the competences needed to meet the current and future situation. At
initial training, teachers show stable profiles in their level of acquisition of these skills. These
groups also show a consistent relationship with the perspectives on education, so that a
higher level of technological competence have greater inclination towards teaching and
learning from a constructivist perspective.
Keywords: Technological competences on ICT, Teachers' initial education, Perspectives on
education.
Introduccin
En la actualidad, la introduccin de las Tecnologas de la Informacin y de la
Comunicacin (TIC) en la escuela es un hecho, aunque la integracin de estos recursos en el
proceso de enseanza-aprendizaje destaca por su lentitud.
978-84-695-8363-0
1240
El profesorado, en este proceso integrador, se distingue por su papel esencial, pues sin
esta figura la implementacin de las TIC no se llevara a cabo. Adems, la insercin de estos
recursos tecnolgicos supone un cambio en la forma de enseanza del profesorado,
destacando por un modelo de enseanza centrado en el aprendizaje. A este respecto, Ertmer y
Ottenbreif-Leftwich (2010) destacan como variables clave para la integracin del profesorado
las competencias en TIC y las creencias pedaggicas.
De este modo, el profesorado, tanto el activo como en formacin, necesita dominar los
recursos tecnolgicos, lo que implica poseer competencias en TIC. A lo largo de estos ltimos
aos, diferentes instituciones han delimitado un marco competencial en TIC por parte del
profesorado (ISTE, 2008; UNESCO, 2008). Sin embargo, la definicin explcita de planos
competenciales no se ha realizado. Surez-Rodrguez, Almerich, Gargallo y Aliaga (2013) y
Surez-Rodrguez, Almerich, Daz-Garca y Fernndez-Piqueras (2012) han estructurado las
competencias en TIC en dos planos: tecnolgico y competencial. El plano tecnolgico hace
referencia a los conocimientos y habilidades que presenta el profesorado en los recursos
tecnolgicos. El plano pedaggico se refiere al conocimiento y habilidad que presenta el
profesorado en el diseo y desarrollo curricular, as como en la planificacin y organizacin
educativa de su prctica educativa. Adems, Almerich, Surez, Belloch, y Orellana (2010)
encontraron una vinculacin entre las competencias tecnolgicas y el uso que realiza el
profesorado de los recursos tecnolgicos en su labor docente, de modo que a mayor
competencia tecnolgica mayor uso de estos recursos.
Por otra parte, el otro aspecto clave est constituido por las creencias del profesorado.
Aunque es un concepto amplio (Ertmer, 2005; Hermans, Tondeur, van Braak y Valcke,
2008), se puede distinguir entre las creencias sobre la tecnologa y las creencias sobre la
enseanza y aprendizaje (Hew y Brush, 2007). Respecto a estas ltimas, Hermans et al.
(2008) sealan que estas creencias se centran en dos enfoques: centrado en el profesor o en la
enseanza; o centrado en el aprendizaje o en el alumnado. Ertmer y Ottenbreif-Leftwich
(2010) sealan que el profesorado con modelo centrado en la enseanza, modelo tradicional,
realiza un uso de la tecnologa menor, mientras que el profesorado con un modelo centrado en
el aprendizaje, modelo constructivista, realiza un uso de la tecnologa de mayor nivel. Sang,
Valcke, van Braak y Tondeur (2010) tambin sealan que el profesorado en formacin con
fuertes creencias constructivistas muestra una mayor disposicin a la integracin de las
tecnologas en su enseanza. Boza, Tirado y Guzmn-Franco (2010) tambin sealan la
relacin positiva entre las creencias del profesorado y el uso de las tecnologas.
Por consiguiente, tanto las competencias tecnolgicas como las creencias sobre el
proceso de enseanza y aprendizaje representan una mayor integracin de los recursos
tecnolgicos. De este modo, el propsito de este trabajo es comprobar la relacin entre las
competencias tecnolgicas y las creencias sobre su perspectiva de la educacin, como futuros
predictores de la integracin de las TIC en la prctica educativa.
Mtodo
El diseo de estudio utilizado es un estudio de encuesta de tipo transversal. La muestra
est constituida por 558 estudiantes de Magisterio de la Universidad Catlica de Valencia de
distintas especialidades, cuyas caractersticas definitorias esenciales se encuentran en la Tabla
1. El tipo de muestreo utilizado es un muestreo de cuotas, estableciendo como criterios las
diferentes especialidades y el curso.
978-84-695-8363-0
1241
Tabla 1
Caractersticas de la muestra
Gnero
Chicas: 82,8%
Chicos: 17,2%
Edad media: 23,1
Edad
Disponibilidad de
ordenador en casa
Disponibilidad de
Internet en casa
Rango: 18-58
S: 99,8%
No: 0,2%
S: 96,5%
No: 3,5%
Especialidades
Infantil: 40%
Primaria: 31,1%
Otras especialidades (28,9%):
Educacin Fsica: 4,1%
Educacin Musical: 8,8%
Educacin Especial: 5,6%
Audicin y lenguajes: 1,6%
Lengua extranjera: 8,8%
Tecnologas de la Informacin y
Comunicacin (TIC)
Denominacin
CTMANUSO_HBSO
CTMANUSO_MBS
CTMANUSO_HR
CTAPLIBAS_DOCS
CTAPLIBAS_BDHC
CTMULPRES_GESINF
CTMULPRES_AUVID
CTMULPRES_PRES
CTMULPRES_SOFTED
CTTIC_INTBAS
CTTIC_INTCOM
CTTIC_INTDP
CTTIC_EVA
CTTIC_WEB2
978-84-695-8363-0
1242
Tabla 3
Escalas de la prueba CEMEDEPU, correspondientes a los modelos de enseanza (Gargallo, Surez,
Garfella y Fernndez, 2011)
Dime nsiones de la Escala A:
Modelo Centrado en la
Enseanza
Concepcin tradicional del
conocimiento y del
aprendizaje
Concepcin tradicional de la
enseanza y del papel del
profesor
Uso de mtodos de enseanza
y evaluacin tradicionales
Denominacin
MDEAF1
MDEAF2
MDEAF3
Denominacin
MDEBF1
MDEBF2
MDEBF3
MDEBF4
El anlisis de datos, obtenidos mediante el programa SPSS 19.0, que se han realizado
son anlisis de clster, MANOVA y ANOVA.
El procedimiento de recogida de la informacin se ha llevado a cabo en el segundo
cuatrimestre del curso 2009-10, mediante cuestionarios en papel.
Resultados
A partir de las 14 dimensiones de competencia tecnolgica, a travs del anlisis de
conglomerados, se obtiene una solucin de 2 grupos Alto y Bajo, con perfiles claramente
diferenciados ver Grfico 1-. El nmero de estudiantes es ligeramente superior en el grupo
de nivel de competencia tecnolgica baja -ver Tabla 2-, con un 56,6% de estudiantes de
magisterio ubicados en este grupo, respecto al grupo de competencia tecnolgica baja, en el
que se sitan el 43,4% restante.
Grfico 1. Perfiles de los estudiantes de Magisterio en los dos grupos segn su nivel de
Competencia Tecnolgica
978-84-695-8363-0
1243
Los estudiantes de Magisterio se caracterizan, a nivel global, por alcanzar niveles altos en
las Competencias Tecnolgicas de Herramientas Bsicas Sistema Operativo
(CTMANUSO_HBSO), Internet bsica (CTTIC_INTBAS) e Internet para la comunicacin
(CTTIC_INTCOM). Aunque es ms reseable los niveles bajos alcanzados en: Internet
diseo pginas y sitios web (CTTIC_INTDP), Herramientas colaborativas web2.0
(CTTIC_WEB2) y Software educativo (CTMULPRES_SOFTED). Estos niveles bajos se
relacionan fundamentalmente con competencias de gran importancia en el mbito educativo,
necesarias para que en su actividad futura como docentes puedan dar respuesta a los retos
educativos en el siglo XXI.
El contraste multivariado a partir del MANOVA, resulta altamente significativo (Lambda
de Wilks p.01, F14,543=144,434) y explicando el global de las dimensiones un 78,8% de
lasdiferencias entre los grupos.
En el ANOVA realizado, con el fin de comprobar el grado de significacin de las
diferencias entre los grupos de nivel de competencia alto y bajo, se observa en todas las
dimensiones de competencia tecnolgica unas diferencias significativas al 99% (p0,01),
alcanzando adems todas ellas un nivel alto de varianza explicada, situndose entre el 12,4%
de Herramientas bsicas de sistema operativo y el 48,1% de Software educativo.
Los anlisis realizados respecto a las dimensiones del cuestionario CEMEDEPU -ver
Tabla 3-muestran que los estudiantes de Magisterio, en general, alcanzan mayores
puntuaciones en las dimensiones que hacen referencia a una concepcin constructivista de
aprendizaje, y puntuaciones ms bajas en las dimensiones centradas en la enseanza ms
tradicional, especialmente en la dimensin: Uso de mtodos de enseanza y evaluacin
tradicionales (MDEAF3) ver Grfico 2-.
978-84-695-8363-0
1244
Variable
dependiente
MDEAF2
MDEAF3
MDEBF1
MDEBF2
MDEBF3
MDEBF4
MDEAF1
Suma de
cuadrados
tipo III
5,159
584,642
9,176
34,563
6,340
1,007
86,195
gl
1
1
1
1
1
1
1
Media
cuadrtica
5,159
584,642
9,176
34,563
6,340
1,007
86,195
F
,675
27,469
1,127
17,369
2,249
4,736
20,138
Significacin
,412
,000
,289
,000
,134
,030
,000
Eta al
cuadrado
parcial
,001
,051
,002
,033
,004
,009
,038
A nivel univariado, los resultados del ANOVA -ver Tabla 4- muestran diferencias
significativas al 0.01 en las dimensiones: La concepcin tradicional de conocimiento y el
aprendizaje (MDEAF1), Uso de mtodos de enseanza y evaluacin tradicionales (MDEAF3)
y, El conocimiento como construccin (MDEBF2). Tambin se obtienen diferencias
significativas, pero al nivel de 0.05 en la dimensin Uso de metodologas de evaluacin de
tipo formativo (MDEBF4). La explicacin de las diferencias observadas entre ambos grupos
a partir de la eta cuadrado parcial- se sita en niveles moderados entre un 3-5%, salvo en el
caso de la dimensin MDEBF4 que se encuentra ligeramente por debajo del 1%.
Conclusiones
Los resultados de este estudio muestran que los estudiantes de Magisterio tienen an
carencias importantes en su formacin en TIC, dado que muestran niveles de competencia
tecnolgica bajos en diferentes recursos y herramientas tecnolgicas que les van a ser
necesarias en su futuro profesional, para atender a las necesidades educativas de sus alumnos
con el fin de prepararlos para la sociedad de la informacin y el conocimiento propia del siglo
XXI. As, el bajo nivel de competencia en software educativo y en las herramientas
colaborativas propias de la web 2.0, que se observa a nivel general en el conjunto de
estudiantes de Magisterio, tendr unas consecuencias claras sobre su quehacer profesional
futuro. Estos resultados contrastan con los obtenidos por Roig y Pascual (2012) que
obtuvieron un buen nivel en las competencias digitales en estudiantes de magisterio si bien
estn en mejor consonancia con los hallados por Prendes, Castaeda y Gutirrez (2010)
tambin en estudiantes de magisterio, aunque en ambos casos no se refieren nicamente a las
competencias tecnolgicas. Adems, se han obtenido dos grupos de competencia tecnolgica.
Un grupo muestra un dominio de los recursos tecnolgicos alto, mientras el otro bajo. En
ambos casos el patrn es semejante al comentado anteriormente.
A nivel global, los estudiantes de Magisterio se aproximan ms a una concepcin de los
procesos de enseanza/aprendizaje constructivista. Sin embargo, se observan ciertas
diferencias que indican que los conocimientos y competencias tecnolgicas tienen un
correlato directo sobre sus concepciones y metodologas de enseanza/aprendizaje,
encontrndose que el grupo de estudiantes con mayor competencia tecnolgica tienen
concepciones de los procesos de enseanza/aprendizaje ms constructivistas, mientras que los
978-84-695-8363-0
1245
estudiantes con menor competencia tecnolgica alcanzan mayores niveles en las dimensiones
centradas en la enseanza y con un planteamiento ms tradicional.
Los resultados obtenidos hacen pensar que pueden coexistir otras variables que estn
incidiendo en la cuestin planteada. Especialmente, sera interesante conocer si los perfiles de
los grupos se deben nicamente a los diferentes niveles en competencia tecnolgica o si
existen otras variables, como pueden ser diferentes niveles de competencia general y/o
acadmica, que podran aclarar los niveles obtenidos en la dimensin de Uso de mtodos de
enseanza y evaluacin tradicionales (MDEAF3), en la que alcanzan niveles ms altos los
estudiantes del grupo de competencia tecnolgica alta. Si bien los resultados obtenidos son
significativos, en varias de las dimensiones, consideramos que los bajos niveles generales en
las escalas de competencia tecnolgica que tienen una relacin ms clara sobre la educacin
(Internet diseo pginas y sitios web, Herramientas colaborativas web2.0 y Software
educativo) pueden incidir directamente sobre la conceptualizacin de los modelos de
enseanza/aprendizaje.
Por ltimo, se ha de apuntar la relacin positiva entre competencias tecnolgicas y las
creencias pedaggicas relativas al modelo de proceso de enseanza-aprendizaje. Estos
resultados son semejantes a los hallados por Hermans et al. (2008) y Sang et al. (2008), por lo
cual las competencias tecnolgicas pueden ser un predictor de la futura integracin de estos
recursos en el aula, como as tambin han demostrado Almerich, Surez, Jornet y Orellana
(2011) en cuanto a la relacin entre las competencias en TIC y el uso docente de estos
recursos educativos.
Referencias
Almerich, G., Surez, J., Belloch, C. y Orellana, N. (2010). Perfiles del profesorado a partir
del conocimiento de los recursos tecnolgicos y su relacin con el uso que hacen de estas
tecnologas. Revista Complutense de Educacin, 21(2), 247-269.
Almerich, G., Surez, J.M., Jornet, J.M. y Orellana, N. (2011). Las competencias y el uso de
las Tecnologas de Informacin y Comunicacin (TIC) por el profesorado: estructura
dimensional. Revista Electrnica de Investigacin Educativa, 13-1. Disponible en
<http://redie.uabc.mx/index.php/redie/article/view/269/432>
Boza, ., Tirado, R. y Guzmn-Franco, M. D. (2010). Creencias del profesorado sobre el
significado de la tecnologa en la enseanza: influencia para su insercin en los centros
docentes andaluces. RELIEVE, 16(1). Disponible en
<http://www.uv.es/RELIEVE/v16n1/RELIEVEv16n1_5.htm>
Ertmer, P. A. (2005). Teacher pedagogical beliefs: The final frontier in our quest for
technology integration? Educational Technology Research and Development, 53(4), 2539.
Ertmer, P. A. y Ottenbreit-Leftwich, A.T. (2010). Teacher technology change. How
knowledge, confidence, beliefs and culture intersect. Journal of Research on Technology
in Education, 42(3), 255-284.
978-84-695-8363-0
1246
Hermans, R., Tondeur, J., van Braak, J., & Valcke, M. (2008). The impact of primary school
teachers educational beliefs on the classroom use of computers. Computers & Education,
51, 14991509.
Hew, K. F., & Brush, T. (2007). Integrating technology into K-12 teaching and learning:
Current knowledge gaps and recommendations for future research. Educational
Technology Research and Development, 55, 223252.
ISTE (2008). NETS for teachers: National educational technology standards for teachers.
International society for technology in education. Disponible en
<http://www.iste.org/docs/pdfs/nets-t-standards.pdf?sfvrsn=2>
Prendes, M. P., Castaeda, L. y Gutirrez, I. (2010). Competencias para el uso de TIC de los
futuros maestros. Comunicar, 35, 175-182.
Roig, R., y Pascual, A. M. (2012). Las competencias digitales de los futuros docentes. Un
anlisis con estudiantes de Magisterio de Educacin Infantil de la Universidad de
Alicante. @ tic. Revista d'innovaci educativa, 9, 53-60.
Sang, G., Valcke, M., Braak, J. V., y Tondeur, J. (2010). Student teachers thinking processes
and ICT integration: Predictors of prospective teaching behaviors with educational
technology. Computers & Education, 54(1), 103-112.
Surez-Rodrguez, J., Almerich, G., Gargallo, B. y Aliaga, F. (2013). Las competencias del
profesorado en TIC: estructura bsica. Educacin XX1, 16, 39-62. doi:
10.5944/educXX1.16.1.716.
Surez-Rodrguez, J.M., Almerich, G., Daz-Garca, I. y Fernndez-Piqueras, R. (2012).
Competencias del profesorado en las TIC. Influencia de factores personales y
contextuales. Universitas Psychologica, 11(1), 293-309.
UNESCO (2008). Normas UNESCO sobre competencias en TIC para docentes. Disponible
en <http://cst.unesco-ci.org/sites/projects/cst/default.aspx>
978-84-695-8363-0
1247
Resumen
Los resultados que presentamos en esta comunicacin, se encuentran enmarcados dentro de
una investigacin, actualmente en curso, llevada a cabo por parte de un equipo
multidisciplinar (Ciencias de la Educacin, Ciencias Econmicas, Ciencias de la Salud y
Ciencias Experimentales) de la Universidad de Sevilla. Dicho estudio gira en torno a las
barreras y ayudas que los estudiantes con discapacidad de la Universidad de Sevilla se
enfrentan durante su trayectoria acadmica en el aula, y en la institucin. La metodologa
que se ha utilizado para esta investigacin ha sido la biogrfico-narrativa, hacindose uso de
las distintas tcnicas de recogida de datos entrevistas en profundidad, fotografas, autoinformes, etc.- y basndonos en un sistema de anlisis narrativo y estructural. El trabajo que
se presenta en este congreso, se centra en la formacin permanente del profesorado as como
las metodologas inclusivas utilizadas en clase, y, en el papel destacado que juegan las
Nuevas Tecnologas como ayuda al aprendizaje. La comunicacin que presentamos se centra
en el anlisis de estas barreras y ayudas referidas a los estudiantes del mbito de las
Ciencias Sociales y Jurdicas, en concreto en las Facultades de Psicologa, Ciencias de la
Educacin y Filosofa de la Universidad de Sevilla. Entre algunas de las conclusiones
extradas, podemos observar cmo el alumnado con discapacidad reclama un profesorado
formado y sensibilizado ante sus necesidades y el uso de las Nuevas Tecnologas como un
apoyo fundamental para poder seguir las clases.
Descriptores:
accesibilidad.
Discapacidad,
Profesorado,
Nuevas
tecnologas,
barreras,
ayudas,
Abstract
The summary below, framed within an investigation currently under way by a
multidisciplinary team (educational sciences, economic sciences, health sciences and
experimental sciences) at the University of Seville. The investigation revolves around the
barriers and supports students with disabilities at the University of Seville faced during his
academic career in the classroom, focusing mainly on this work from the permanent teacher
training policies and inclusive methodologies and in the role that play new technologies as an
aid to learning. For this, we created research instruments focusing on the biographical
methodology narrative. The communication that we present focuses on the analysis of these
barriers and supports to students in the field of the social sciences and law, particularly in the
faculties of psychology, educational sciences and philosophy of the University of Seville.
978-84-695-8363-0
1248
Marco terico
En la sociedad actual existe una necesidad imperante de innovacin e investigacin
colaborativa en la educacin, sobre todo en el tema y en el mbito de las personas con
discapacidad. En este caso, la Universidad ha de servir tanto al cambio social como al
desarrollo econmico para fomentar la investigacin en dicho tema y generar nuevos
conocimientos (Straus y Sales, 2010) y, por lo tanto, promover o, al menos, intentar crear
Universidades ms inclusivas y mejor adaptadas a la diversidad del alumnado.
Es evidente y demostrable en cifras, que el nmero de personas con discapacidad que
deciden acceder a las Universidades para continuar su formacin va en aumento con el paso
de los aos, ascendiendo ste caso 15.000 estudiantes aproximadamente (Snchez Palomino,
2011; Castro de Paz y Abad Morillas, 2009). Sin embargo, la diferencia de porcentaje entre el
alumnado con discapacidad y el alumnado sin discapacidad es bastante significativa: menos
del 1% de los universitarios son estudiantes con discapacidad (Castro de Paz y Abad Morillas,
2009).Las universidades han de tener un compromiso constante para mejorar su sistema de
acceso y por mejorar la formacin que ofrece a las necesidades de su alumnado. En la
actualidad, existen infinitud de definiciones sobre la accesibilidad, pero en numerosas
ocasiones, hacen alusin a la fuente originaria de donde proceden o que impiden el acceso.
Desde nuestro punto de vista, y para el principal inters en el que radica nuestro trabajo,
definiremos que la accesibilidad implica dos dimensiones: una social y otra tcnica. La
primera porque el derecho de la persona a la no discriminacin por ningn tipo de causa
justificada, lo que desemboca en una serie de infraestructuras y medios que permitan dicha
igualdad de disfrute de derechos fundamentales (Fraiz Brea, Aln Gonzlez, Domnguez
Vila, 2008:408); la segunda, debe de formar a los futuros profesionales que no nicamente
sean expertos en sus materias, sino que tambin stas tengan en cuenta la accesibilidad y la
sostenibilidad ante el medio que les rodea (Fraiz Brea, Aln Gonzlez y Domnguez Vila,
2008).
En la actualidad, cada universidad da respuestas muy variopintas entre ellas mismas
para implantar de una manera efectiva el principio de igualdad de oportunidades entre su
alumnado (Castro de Paz y Abad Morillas, 2009); no obstante, a diferencia con los niveles
obligatorios de enseanza, la Universidad no ha seguido un proceso claro de adaptacin a
las medidas especiales de inclusin (Alegre 2004, en Castro de Paz y Abad Morillas,
2009:166).
Otro de los datos de mejora hacia prcticas educativas ms inclusivas que nos ha
facilitado la revisin de literatura, es referente a la labor del profesorado y cmo sta se vera
optimizada si stos les facilitara al alumnado con discapacidad toda la informacin y recursos
necesarios para superar con xito el proceso de aprendizaje de la materia y, cmo ayudara a
todo este proceso, una correcta formacin y mayor sensibilizacin del profesorado y, por
supuesto, una actitud abierta ante el cambio cuando fuera necesario (Stainback y Stainback,
1999; Castro de Paz et al, 2006; Castellana Rossell y Sala Bras, 2005).
Es cierto, como indica Peralta (2007) (en Castro de Paz y Abad Morillas, 2009), que
las universidades han ido iniciado y realizado esfuerzos cada vez mayores para realizar y
978-84-695-8363-0
1249
978-84-695-8363-0
1250
Una de las crticas fundamentales que se le realiza a la enseanza que ofrecen las
universidades, es la calidad de la misma debido a la masificacin de las aulas; caracterstica
que segn Primo Yufera (1994) conlleva a la mediocridad. Precisamente, el Plan de Bolonia
que se ha instalado en nuestras universidades, precisamente pretende paliar esta deficiencia
bajando la ratio de alumnado-profesorado.
Se propone por lo tanto, que la educacin sea un espacio y un proceso donde se forma
y se prepare al alumnado para el desempeo de su labor profesional y social en un futuro,
aspecto que va a ser duradero durante toda la vida del hombre. El sujeto, no ha de ser un ente
pasivo en su formacin, ha de ser activo, partcipe en su propio proceso de aprendizaje, de
manera que su aprendizaje sea autnomo, construido y por lo tanto, significativo para l
(Gaeta Gonzlez, 2006). Nos encontramos ante un nuevo modelo de aprendizaje, el cual anule
por completo el sistema de pedagoga bancaria que Freire denomin, que la formacin y la
enseanza no se centre nicamente en la transmisin de un conocimiento por parte del
docente y en una asimilacin pasiva de los mismos por parte del alumno o alumna; sino que
stos, sean el propio centro de su aprendizaje contextualizndolos en su propio contexto y
construyndolo l o ella misma, ya que de esta forma es la nica manera que cree
herramientas de cambio y de construccin social.
Por lo tanto, las estrategias de aprendizaje han de asimilarse e integrarse como saberes,
donde cada sujeto debe de partir de su conocimiento y la amplitud que ste le quiera dar para
los cual ha diseado la estrategia (Escribano, 1995), utilizndola en su da a da en diferentes
situaciones y, otorgndole de este modo, gran importancia al contexto que envuelve a esas
estrategias de aprendizaje y a su posterior puesta en prctica.
Estudio
Los resultados presentados en este trabajo corresponden a una investigacin,
actualmente en curso por un equipo multidisciplinar de profesorado de la Universidad de
Sevilla y financiada por el MICINN Barreras y ayudas que los estudiantes con discapacidad
identifican en la Universidad. Dicha investigacin gira sobre a las barreras y ayudas que los
estudiantes con discapacidad de la Universidad de Sevilla se enfrentan durante su trayectoria
acadmica, tanto a nivel institucional como de aula.
Los participantes del trabajo (primera fase) son 44 estudiantes con discapacidad. En
esta comunicacin, nos centraremos en analizar 11 experiencias y testimonios de estudiantes
con discapacidad pertenecientes a las Facultades de Filosofa, Psicologa y Ciencias de la
Educacin. Para poder acceder a dicha muestra, nos pusimos en contacto con la persona
responsable de la unidad de atencin al alumnado con discapacidad de la Universidad de
Sevilla quin intermedi y dio a conocer el proyecto al alumnado con discapacidad de la US.
En este sentido, el trabajo de investigacin se ha centrado en tres objetivos: Identificar,
describir y explicar las barreras y las ayudas que los estudiantes con discapacidad perciben en
su acceso, trayectoria y resultados en la Universidad como Institucin; Identificar, describir y
explicar las barreras y ayudas que los estudiantes con discapacidad experimentan en las aulas
universitarias; y Disear una gua de formacin online para el profesorado universitario con el
fin de dar respuesta a las necesidades educativas del alumnado con discapacidad.
En esta comunicacin, nos centramos en el segundo objetivo analizando, a travs de la
metodologa biogrfica-narrativa, cmo la formacin del profesorado en relacin a la
978-84-695-8363-0
1251
diversidad y cmo las Nuevas Tecnologas influyen en los procesos de aprendizaje del
alumnado.
Los datos presentados son correspondiente a la primera fase de investigacin,
concretamente, han sido extrado a travs de los grupos de discusin con preguntas como:
Consideras que el profesorado est formado para atender a la diversidad? Por qu?
En la asignatura que estas cursando utilizan la enseanza virtual y herramientas
tecnolgicas (blog, wikis, plataformas)? cmo lo valoris? contribuye a facilitaros
los procesos de aprendizaje o lo dificultan? por qu?
Los resultados de este trabajo, por tanto, girarn en torno al anlisis realizado de las
respuestas a los anteriores interrogantes (grupos de discusin y entrevistas). La tercera parte
de esta primera fase de investigacin, que actualmente se encuentra en curso y por lo cual no
la abordaremos, corresponde con una investigacin basada en historias de vida en
profundidad con estudiantes seleccionados de la primera fase. Estas historias se caracterizan
por ser temticas (Sandn, 2003), ya que nos centraremos en un perodo y asunto particular de
la vida la trayectoria universitaria- de las personas que participarn en esta investigacin.
Los resultados de esta comunicacin dan respuestas a los interrogantes anteriormente
indicados. Para este anlisis de los grupos de discusin y entrevistas individuales realizadas
hemos usado el sistema de categoras y cdigos propuestos por Miles y Huberman (1994).
Aunque este sistema todava est sin finalizar, ya que hablamos de una investigacin que
actualmente se est llevando a cabo, podemos resumir que las categoras en las cuales nos
hemos basado para realizar el anlisis de los datos obtenidos referente al Profesorado y a los
Proyectos Docentes de los mismos han sido tres: 1. Informacin general; 2. Barreras aula y 3.
Ayudas aula. Por la categorizacin de estos datos, hemos acudido al software informtico de
anlisis de datos MAXqda 10.
Resultados
A continuacin, mostramos los resultados obtenidos a travs de las diferentes tcnicas
biogrfico-narrativas, enfocndose stos en torno a las dos preguntas realizadas a los
estudiantes:
Consideras que el profesorado est formado para atender a la diversidad? Por qu?
Tras el anlisis realizado, los once participantes de los grupos de discusin y
entrevistas llegan al consenso de que el profesorado aparece en su trayectoria con un doble
papel: como ayuda y como barrera a la hora de que stos realicen con satisfaccin sus
estudios.
Referente a la cuestin planteada sobre la formacin del profesorado frente a la
diversidad, nos hemos encontrado con una respuesta unnime por parte del grupo: el
profesorado no se encuentra lo suficientemente preparado para responder a las necesidades
educativas que los alumnos con discapacidad y lo que ellos y ellas sealan como ms
asombroso an, es que le extraa que en carreras de Ciencias Sociales como es el caso de
Magisterio, Pedagoga y Psicologa tengan ste carencia, considerndose sta una formacin
indispensable. Indican adems, que aunque se carezca de esa formacin, hay cuestiones tan
978-84-695-8363-0
1252
simples como puede ser sensibilizarse y ponerse en el lugar del otro para poder dar y ayudar a
las necesidades que stos estudiantes puedan tener, e incluso proponen una formacin
especfica al alumnado referente a este tema, la discapacidad y la inclusin. Debido a estos
reclamos, se abre entre los participantes un debate:
RSP9: yo estoy con RSP10, que no estn formados en ese sentido porque t les
llegas y no saben qu hacer, t les dices mira yo tengo esta discapacidad y necesito
estas adaptaciones y te dicen bueno y eso como lo hago y muchas veces he tenido
que ser yo como tienen que adaptar mis cosas, que yo no entiendo, no hay formacin
para atender a las distintas discapacidades (Grupo de discusin Aula II)
No obstante, los participantes sealan, que la gran mayora del profesorado que han
tenido es humanitario y suponen un gran apoyo en su aprendizaje. Indican que unos de los
motivos para que el profesorado le suponga una ayuda en el desarrollo del aprendizaje es que
le han facilitado el material de la asignaturas por adelantado, la atencin especial que le
muestran a sus necesidades individuales y han utilizado las Nuevas Tecnologas para impartir
su asignatura, aspecto que le han ofrecido una gran ayuda para seguir el ritmo habitual de sus
compaeros y compaeras sin tener que realizar esfuerzos sobrehumanos para poder
aprobar, etc.
RSP4: En cuanto al profesorado, no tengo ms que destacar al hecho de que me han
aportado bastante ayuda y facilidades. En general, este curso, he recibido atencin,
apoyo y comprensin por parte de los profesores. (Autoinforme)
Al finalizar el grupo de discusin, se concluy con una pregunta a los once
participantes: en el futuro, qu le recomendaras a los profesores y profesoras para que sus
clases fueran ms inclusivas, y por lo tanto, para que todo el alumnado pueda aprender y
participar?. La gran mayora de los participantes, coinciden en sealar una mejor y mayor
formacin del profesorado ante la discapacidad y que, por lo tanto, esto le permitieran realizar
clases ms inclusivas.
Tambin sealan, que sera importante realizar clases ms prcticas y condensar el
material y contenido de las asignaturas sin que stos sean tan excesos que desborden las
capacidades de los estudiantes; que el profesorado tenga sus clases preparadas y trabajadas,
pero sobre todo, como seala RSP1, que tengan un cambio de mentalidad y mayor
sensibilizacin ante las necesidades individuales tanto personales como acadmicas. Ante este
hilo de debate, RSP10, seala que las barreras ms visibles y las denunciadas son las
arquitectnicas, pero que stas, en su gran mayora, afecta a las personas que padezcan
discapacidad fsica y que hay otros tipos de barreras que no son tan visibles, que son ms
abundantes y que son necesarias tambin trabajarlas y subsanarlas, como es el caso, de la ya
tan reiterada formacin y sensibilizacin:
RSP3: Ms formacin. Quiz que se formen. No s, que si ven algn tipo de
problema, habr quin busque de ese problema informacin y habr quin no busque.
(Entrevista Individual)
En la asignatura que estas cursando utilizan la enseanza virtual y herramientas
tecnolgicas (blog, wikis, plataformas)? cmo lo valoris? contribuye a facilitaros
los procesos de aprendizaje o lo dificultan? por qu?
978-84-695-8363-0
1253
978-84-695-8363-0
1254
su aprendizaje. Asimismo, este dato que ha aparecido en este trabajo, se ve reforzado en otras
investigaciones tanto nacionales como internacionales, como es el caso de Castellana y Sala
(2005), Gitlow (1999), Poussu-Olli (1999), Snchez Carrin (2010), o Snchez Palomino
(2009, 2011), llevndonos, por lo tanto, a la conclusin que el profesorado debera de recibir
asesoramiento y formacin para mejorar su respuesta ante la diversidad ya que cada persona
es nica, y que, por lo tanto, la respuesta y adaptaciones que a ste se le haya de dar ante sus
necesidades ha de ser tambin nicas.
En esta lnea, Castellana y Sala (2005), Gibbs (2004), Gitlow (1999), Moria (2010) o
Sharma, Forlin y Loreman (2008)indican que el profesorado ha de estar capacitado y formado
para ensear con eficiencia en las aulas dando respuesta a todas las necesidades individuales
de aprendizaje que su alumnado pueda tener, adquiriendo un compromiso frente al mismo.
Por lo tanto, podemos concluir indicando que el sistema educativo y el contexto
escolar presentan mltiples barreras, de diversa ndole, que impiden la plena participacin y
aprendizaje del sujeto en el aula en condiciones de igualdad (Echeta, 2006; Huguet, 2006;
Booth y Ainscow, 2005), y en este estudio, los resultados obtenidos nos presentan la atencin
a las necesidades de aprendizaje individuales del alumnado por parte del profesorado, as
como su formacin para atender a la diversidad, supondra la eliminacin de barreras de
aprendizaje y una mayor inclusin en el aula as como la utilizacin de las Nuevas
Tecnologas en el desarrollo de los Proyectos Docentes de las asignaturas, las cuales resultan
una gran ayuda para poder seguir las clases y el proceso de enseanza-aprendizaje ya que
pueden seguir las asignaturas desde sus casas, obtener el material en formato digital, ponerse
en contacto con el profesor o profesora de manera casi inmediata, etc. As, Lavi y Marcelo
(2000), indican que se han de aprovechar este espacio que nos facilitan las Nuevas
Tecnologas ya que nos permite hacer llegar ms cosas y en un corto espacio temporal a ms
personas, que stas puedan trabajar juntas, desarrollar y mejorar.
Referencias
Booth, T. y Ainscow, M. (2005). Gua para la evaluacin y mejora de la educacin inclusiva.
Desarrollando el aprendizaje y la participacin en las escuelas. Vitoria: Servicio Central
de Publicaciones del Gobierno Vasco.
Castellana Rosell, M. y Sala Bars, I. (2005). La Universidad ante la diversidad del aula. Aula
Abierta, 85, 57-84.
Castro de Paz, J. F., Llorca Linares, M., lvarez Prez, P. y lvarez Durn, D. (2006).
Universidad y Diversidad: necesidades docentes en la atencin al alumnado con
discapacidad. Revista Qurriculum, 19, 189-209.
Castro de Paz, J.F. y Abad Morillas, M. (2009). La incorporacin a los estudios superiores:
situacin del alumnado con discapacidad. Qurriculum: Revista de Teora, Investigacin y
Prctica Educativa, 22, 165-188.
Echeta, G. (2006). Educacin para la inclusin o educacin sin exclusiones. Madrid: Narcea.
Escribano Gonzlez, A. (1995). Aprendizaje cooperativo y autnomo en la enseanza
universitaria. Enseanza & Teaching: Revista Interuniversitaria De Didctica, 13, 89104.
978-84-695-8363-0
1255
Fraiz Brea, J.A.,Aln Gonzlez, M.E. y Domnguez Vila, T. (2008). La accesibilidad como
nexo de unin entre la Universidad y la sociedad: la creacin de mercados globales e
integradores. En E.J. Castro de Silva y J. Daz de Castro (Coords.), Universidad,
Sociedad y Mercados Globales (pp. 409-420). Asociacin Espaola de Direccin y
Economa de la Empresa (AEDEM).
Gaeta Gonzlez, M.L. (2006). Estrategias de autorregulacin del aprendizaje: contribucin de
la orientacin de meta y la estructura de las metas del aula. Revista Electrnica
Interuniversitaria de Formacin del Profesorado, 9(1), 1-8.
Gibbs, G. (2004). Mejorar la enseanza y el aprendizaje universitario mediante estrategias
institucionales. Educar, 33, 11-30.
Gitlow, L. (1999) Individuals with disabilities and professional education programmes: An
analysis of legislation, court rulings and policy. Disability and Society, 14(2), 239-248.
Huguet Comelles, T. (2006). Aprender juntos en la escuela. Una propuesta inclusiva.
Barcelona: Gra.
Lavi Martnez, J.M. y Marcelo Garca, C. (2000). Formacin y nuevas tecnologas:
posibilidades y condiciones de la teleformacin como espacio de aprendizaje. Bordn,
Revista de Pedagoga, 52(3), 385-406.
Miles, M.B. y Huberman, A.M. (1994). Qualitative data analysis. Beberli Hills, CA: Sage
Publications.
Moria Dez, A. (2010). School memories by young people with disbilities: An analysis of
barriers and aids to inclusion. Disability & Society, 25(2), 163-175.
Poussu-Olli, H.S. (1999).To be a disabled university student in Finland. Disability and
society, 14(1), 103-113.
Primo Yfera, E. (1994). Introduccin a la investigacin cientfica y tecnolgica. Madrid:
Alianza.
Snchez Palomino, A. (2009). Integracin educativa y social de los estudiantes con
discapacidad en la Universidad de Almera. Almera: Editorial Universidad de Almera.
Snchez Palomino, A. (2011). La universidad de Almera ante la integracin educativa y
social de los estudiantes con discapacidad: ideas y actitudes del personal docente e
investigador. Revista De Educacin, 354, 321-322.
Sandn, M. (2003). Investigacin cualitativa en educacin. Fundamentos y tradiciones.
Barcelona: McGraw Hill.
Sharma, U.,Forlin, C. y Loreman, T. (2008) Impact of training on pre-service teachers
attitudes and concerns about inclusive education and sentiments about persons with
disabilities. Disability and Society, 23(7), 773-785.
Stainback, S. y Stainback, W. (1999). Aulas inclusivas. Madrid: Narcea.
978-84-695-8363-0
1256
Strauss, A.L. y Sales, A. (2010). Practice Brief. Bridging the gap between disability studies
and disability services in Higher Education: A model center on disability. Journal of Post
secondary Education and Disability, 23(1), 79-84.
978-84-695-8363-0
1257
Resumen
La Universitat Internacional Valenciana-VIU es una universidad online audiovisual cuya
metodologa est mediada por las nuevas tecnologas, a travs de recursos para la
comunicacin sncrona y asncrona y el uso de plataformas virtuales de aprendizaje. Este
hecho exige que los estudiantes cuenten con una competencia digital suficiente para que el
proceso de enseanza y aprendizaje se desarrolle de forma adecuada, ms teniendo en cuenta
que la competencia digital es considerada una de las ocho competencias clave para el
aprendizaje permanente por parte de la Unin Europea. Por eso, pretendemos conocer, a
travs de la percepcin del propio alumnado, si la metodologa docente de la universitat ha
influido en la mejora de sus competencias digitales a nivel instrumental, cognitivo y didctico
metodolgico, tomando como muestra a los estudiantes de 2 curso del Grado en Maestro de
Educacin Primaria.
Descriptores: tecnologas de la informacin y la comunicacin, metodologa online,
competencias instrumentales, competencias cognitivas, competencias didcticometodolgicas.
Abstract
The Valencian International University-VIU is an Online University. Its methodology is fully
mediated by new technologies, through resources for synchronous and asynchronous
communication and the use of virtual learning platforms. This requires that students have
enough digital competence for the teaching and learning process is developing properly,
especially considering that digital competition is considered one of the eight key competences
for lifelong learning by the European Union. Therefore, we try to know, through the
perception of students themselves, if the teaching methodology of the University has
influenced the improvement of their instrumental skills, cognitive skills and didactic and
methodological skills, taking as sample students in the 2nd year of the Degree in Master
Elementary Education.
Keywords: information and communication technologies, online methodology, instrumental
skills, cognitive skills, didactic and methodological skills.
978-84-695-8363-0
1258
Introduccin
En las ltimas dcadas, hemos vivido una revolucin digital derivada e ntimamente
asociada a los cambios sociales que ha trado consigo la sociedad del conocimiento. En este
contexto, la llegada de las llamadas nuevas tecnologas, o tecnologas de la informacin y la
comunicacin, ha irrumpido en prcticamente todos los mbitos de la vida cotidiana.
En un primer momento las tecnologas surgieron bajo el mbito de la formacin
profesional y el mbito laboral, como herramientas para la recualificacin del trabajador para
la bsqueda de empleo en la poca del postfordismo y en respuesta a los procesos de
automatizacin de los trabajos. En este sentido, las TICs se convirtieron en un instrumento
para el perfeccionamiento y la actualizacin educativa de aquellos ciudadanos que haban
terminado la educacin bsica sin una especializacin y, por tanto, se ligaban al concepto de
aprendizaje permanente. Sin embargo, esta inicial vinculacin al mundo educativo y
econmico-productivo pronto adquiri una perspectiva ms completa, extendindose en
destinatarios y en mbitos. Este desarrollo se vio beneficiado, entro otras cuestiones, por las
disposiciones a nivel internacional de instituciones como la Unin Europea que han tenido un
reflejo directo sobre las polticas nacionales de los pases que la componen. Estas
disposiciones, inicialmente centradas en la provisin de equipamiento a los centros escolares
(como reproductores audiovisuales), fueron evolucionando hasta una concepcin educativa
donde las TICs pasan de ser una mera herramienta puntual para la docencia, a convertirse
parte de una competencia considerada bsica para el desarrollo de cualquier ciudadano en la
sociedad actual.
Ejemplo de la importancia que se le est otorgando a las TICs, no solamente dentro del
mbito educativo, sino en el desarrollo vital del ciudadano, es el hecho de que la Unin
Europea, en 2006, identificara precisamente la competencia digital como una de las ocho
competencias bsicas del aprendizaje a lo largo de la vida. Concretamente, la Recomendacin
de la Unin Europea, expone que la competencia digital se refiere al uso seguro y crtico de
las TICs en el mbito del trabajo, el ocio y la comunicacin. Es por este motivo, por el que el
desarrollo de esta competencia por parte de los ciudadanos requiere conocimientos, destrezas
y actitudes relativas a la comprensin de la naturaleza, oportunidades y roles de las TICs en la
vida personal, social y laboral. Si esto efectivamente es as, no ser especialmente necesario
que los futuros maestros de educacin primaria adquieran y desarrollen la competencia digital
de modo que puedan ayudar a los alumnos a adquirirla y desarrollarla igualmente?
Quiz por este motivo, las directrices internacionales se han ido plasmando, como se
ha apuntado anteriormente, en las disposiciones legislativas de los diferentes pases. En
Espaa, por ejemplo, y concretando en el mbito educativo y en la formacin del maestro de
educacin primaria, la Ley Orgnica 2/2006, de 3 de mayo, de Educacin (LOE), recoge en su
artculo 17 dedicado a los objetivos de la Educacin Primaria, establece que los alumnos
debern: Iniciarse en la utilizacin, para el aprendizaje, de las tecnologas de la informacin
y la comunicacin desarrollando un espritu crtico ante los mensajes que reciben y elaboran,
concretndose en mayor medida este inters en el Real Decreto 1513/2006, de 7 de diciembre,
por el que se establecen las enseanzas mnimas correspondientes a la Educacin Primaria,
donde se reconoce como una de las competencias bsicas de esta etapa educativa, el
tratamiento de la informacin y competencia digital.
Bajo estas disposiciones, y al margen de que los Grados en Educacin recogen en sus
planes de estudio materias de TIC y educacin, partimos de la conviccin de que la
978-84-695-8363-0
1259
978-84-695-8363-0
1260
978-84-695-8363-0
1261
978-84-695-8363-0
1262
Utilizacin de hoja de clculo (Instr3): existe una coincidencia entre los sujetos que han
comenzado a utilizar esta herramienta a los que ya la utilizaban previamente (41.2%).
Opinin positiva sobre el trabajo colaborativo (Cogni2): el 61,8% de los sujetos afirma
que su inters ha crecido ligera o notablemente.
Inters por actualizar los conocimientos en materia de TICs (Cogni4): el 70,6% de los
sujetos afirma que su inters ha aumentado notablemente.
978-84-695-8363-0
1263
Participacin en un foro a travs del uso del texto (Didac2): el 55,9% de la muestra
afirma haber comenzado a participar en foros a travs del uso de texto con frecuencia
tras haberse matriculado en la VIU, no habindolo hecho previamente.
Didac6
Instr7
Didac5
Instr5
Moda de las
competencias
didcticometodolgicas
Didac4
Moda de
competencias
instrumentales
Instr3
Didac3
Didac2
Didac1
Instr1
0
Cogni5
Cogni4
Cogni4
Cogni3
Cogni3
Cogni2
Cogni2
Cogni1
Cogni1
1
Cogni5
978-84-695-8363-0
1264
Discusin
En base a estos resultados, podemos concluir que, para el criterio Competencias
instrumentales, la mayor parte de los alumnos ha comenzado a utilizar (puntual o
frecuentemente) herramientas que anteriormente no utilizaban. Esto sucede con todas las
herramientas que se proponen (equipos informticos, procesador de texto, hojas de clculo,
wiki, blog, Webquest y foro).
Con respecto a las Competencias cognitivas, la opcin ms frecuente en todos los
tems corresponden con la opcin 3: Mi inters ante estos temas ha crecido notablemente
comparado con el que tena antes de entrar en la VIU. Por tanto, podemos afirmar que han
aumentado las actitudes de reflexin frente a las TIC en la figura del maestro de Primaria,
considerndolas un elemento imprescindible en el mbito educativo e interesndose en el
trabajo colaborativo y en el acceso a distintas fuentes de informacin.
Con respecto al criterio Competencias didctico-metodolgicas, encontramos que la
mayor parte de los alumnos han comenzado a utilizar con frecuencia cuatro de las seis
herramientas para la docencia que se proponen que anteriormente no utilizaban. Se trata de la
participacin en foros a travs del uso de texto o vdeos, el uso de entornos colaborativos y el
uso y participacin de un Wiki.
En base a todo esto, podemos dar una respuesta afirmativa a la hiptesis los alumnos
de la universidad virtual VIU mejoran su nivel de competencia tecnolgica tras haberse
matriculado en la Universidad, basndonos en el hecho de que en los tres criterios que se
proponen ha habido una mayor utilizacin de las herramientas tecnolgicas o un mayor
inters en las tecnologas de la informacin y la comunicacin.
Estos resultados se orientan en el mismo sentido que las fuentes consultadas, que ya
incidan en que la incorporacin de las TIC en la educacin mejora las competencias
tecnolgicas.
Referencias
Consejo Europeo (2006). Recommendation of the European Parliament and of The Council of
18 December 2006 on key competences for lifelong learning (2006/962/EC).
Disponible
en
http://eurlex.europa.eu/LexUriServ/LexUriServ.do?uri=OJ:L:2006:394:0010:0018:en:PDF
Gallego Arrufat, M.J., Gmiz Snchez V. y Gutirrez Santiuste, E. (2010). El futuro docente
ante las competencias en el uso de las tecnologas de la informacin y comunicacin
para ensear. EDUTEC: Revista Electrnica de Tecnologa Educativa, 34.
LOE (2006). Ley Orgnica 2/2006, de 3 de mayo, de Educacin. Boletn Oficial del Estado,
04/05/2006.
MEC (2006). Real Decreto 1513/2006, de 7 de diciembre, por el que se establecen las
enseanzas mnimas correspondientes a la Educacin Primaria. Boletn Oficial del
Estado, 08/12/2006.
978-84-695-8363-0
1265
Valerio Urea, G y Valenzuela Gonzlez, J. R. (2011). Competencias informticas para el elearning 2.0. RIED: Revista Iberoamericana de Educacin a Distancia, 14(1), 137160.
978-84-695-8363-0
1266
Resumen
Analysis of variance.
978-84-695-8363-0
1267
Introduccin
El desarrollo tcnico impulsado en la sociedad actual ha modificado completamente
nuestra relacin con el entorno y con el resto de sujetos (Castells, 1999). Las tecnologas
asociadas a este contexto postindustrial potencian buena parte de las capacidades del hombre
(Prensky, 2009); no slo las que tienen que ver con aquellas capacidades sensoriales, sino
tambin con otras ms complejas, del mbito cognitivo (McLuhan, 1987). As, debido a estos
cambios, socilogos y estudiosos de la realidad social comienzan a demandar una nueva
denominacin de esta sociedad, ms acorde a las nuevas circunstancias que la rodean
(Cassity y Ang, 2006; Cebrin Herreros, 2009; Valimaa y Hoffman, 2008). As, la
denominacin que se ha generalizado en la literatura cientfica y que ha suscitado ms adeptos
es la de sociedad de la informacin (Area Moreira, 2001; Garca Carrasco, 2009).
En este contexto totalmente novedoso el mundo de la educacin, cuyas bases
fundadoras estn fundamentadas en una sociedad industrial, trata de dar una respuesta
adaptativa. Es por eso que surgen instituciones tanto a nivel nacional como internacional que
hacen virar el paradigma educativo hacia la formacin basada en competencias (Delors, 1997;
Diario oficial de la Unin Europea, 2006; OCDE, 2004; UNESCO, 2005). As, podemos
definir estas competencias clave o bsicas como:
Una combinacin de conocimientos, capacidades y actitudes adecuadas al contexto.
Las competencias clave son aquellas que todas las personas precisan para su
realizacin y desarrollo personales, as como para la ciudadana activa, la inclusin
social y el empleo (Diario oficial de la Unin Europea, 2006, p. 13)
En este entorno de formacin basada en competencias bsicas se puede identificar una
competencia clave o bsica, la competencia informacional, que se identifica con la
competencia para el tratamiento de la informacin y competencia digital de los documentos
reguladores espaoles y con la competencia digital de los documentos reguladores europeos.
En base al estudio de la Comisin sectorial de Tecnologas de la Informacin y las
Comunicaciones de la Conferencia de Rectores de Universidades Espaolas (CRUE-TIC)
junto con la Red de Bibliotecas Universitarias (REBIUN), se puede proponer una definicin
de competencia informacional como la que sigue,
Las competencias informacionales son el conjunto de conocimientos, habilidades,
disposiciones y conductas que capacitan a los individuos para reconocer cundo
necesitan informacin, dnde localizarla, cmo evaluar su idoneidad y darle el uso
adecuado de acuerdo con el problema que se plantea (CRUE-TIC & REBIUN,
2009, p. 7)
Se pueden identificar, en base a esta y la mayor parte de definiciones existentes en la
literatura cientfica, cuatro dimensiones tericas, o sub-competencias, implicadas en el
desarrollo de competencias informacionales: la bsqueda de informacin, la evaluacin de
informacin, el procesamiento de informacin y la comunicacin de informacin. Cabe
preguntarse en este punto por el nivel de desarrollo en competencias informacionales del
profesorado encargado de la formacin en el contexto de la sociedad de la informacin.
Concretamente, el presente estudio tiene como objetivo estudiar si existen diferencias entre el
futuro profesorado de educacin secundaria en el nivel autopercibido en el procesamiento de
informacin en funcin del rea de conocimiento al que pertenece (Ciencias e Ingeniera,
Humanidades o Ciencias Sociales).
978-84-695-8363-0
1268
Mtodo
Se plantea un diseo no experimental, de tipo ex post facto, a travs de estudios de
encuesta (Morales Vallejo, 2000). No se pretende manipular algunas variables para observar
el comportamiento de otras, sino medir las variables en su contexto natural y estudiar su
distribucin para explicar una realidad que se desconoce de partida. La poblacin de partida
es el futuro profesorado de educacin secundaria de la comunidad de Castilla y Len. As, se
obtiene una muestra a partir de los sujetos que estn estudiando el mster de profesor en
educacin secundaria en alguna universidad de esta comunidad autnoma. De entre las 4
universidades que ofertan el citado mster en Castilla y Len, se selecciona el conglomerado
de la Universidad de Salamanca, obteniendo finalmente una muestra de 192 sujetos, de los
que 40 pertenecen al rea de Ciencias, 87 a Humanidades y 69 a Ciencias Sociales.
Se considera como variable criterio el nivel autopercibido en procesamiento de la
informacin y como variable predictora el rea de conocimiento de pertenencia del sujeto.
La medicin de la variable criterio se realiza a partir del instrumento validado ILHUMASS (Pinto Molina, 2009), que tiene una estructura factorial conocida (Rodrguez
Conde, Olmos Miguelez y Martnez Abad, 2012), en el que un mdulo de 6 tems mide el
procesamiento de la informacin. Los tems se miden a travs de una escala tipo Likert con
opciones de respuesta de 1 a 9, correspondiendo 1 con un nivel autopercibido muy bajo o nulo
y 9 con un nivel autopercibido muy alto o mximo. El rea de conocimiento (variable
predictora) se extrae de la especialidad en la que los sujetos estn cursando el mster en
profesor de educacin secundaria.
En cuanto al anlisis de datos, se lleva a cabo en primer lugar un anlisis de
componentes principales con los 6 tems de la sub-competencia procesamiento de
informacin en el que se extraen dos factores. Posteriormente, se plantea un diagrama de
dispersin en el que los ejes se corresponden con los dos factores extrados del anlisis de
componentes principales. Se muestran en el diagrama las diferencias entre las diferentes reas
de conocimiento, tanto por colores como por los centroides asociados a cada grupo.
Finalmente, se aplica un anlisis de varianza en el que se contrastan las diferencias entre las
diferentes reas de conocimiento en funcin de los factores extrados en el anlisis de
componentes principales.
Resultados
Mediante la aplicacin del anlisis de componentes principales se obtiene, a partir de
los 6 tems que componen la sub-competencia denominada procesamiento de informacin, un
subespacio de 2 dimensiones que explica el 70% de la variabilidad total encontrada en las
variables originales (tabla I).
978-84-695-8363-0
1269
Tabla 1
Extraccin del anlisis de componentes principales
Autovalores iniciales
Componente
Total
1
2
3
4
5
6
2.492
1.733
0.755
0.440
0.305
0.275
% de la
varianza
41.534
28.887
12.577
7.328
5.089
4.586
%
acumul.
41.534
70.421
82.997
90.325
95.414
100.000
La matriz de componentes principales (Tabla 2) muestra cmo los dos primeros tems,
relacionados con los aspectos cognitivos del procesamiento de la informacin, se agrupan en
el segundo componente. Por su parte, el resto de tems, relacionados con los aspectos
instrumentales, se agrupan en el primer componente. Una vez guardadas las puntuaciones de
cada sujeto para las dos dimensiones obtenidas por el anlisis de componentes principales, se
puede llevar a cabo una representacin, mediante un diagrama de dispersin, de las
puntuaciones de los sujetos en ambas variables en funcin del rea de conocimiento de
referencia.
Tabla 2
Matriz de componentes principales
Componente
1
2
.115
.915
.159
.911
.872
-.006
.787
-.016
.851
.592
-.112
-.233
978-84-695-8363-0
1270
Se puede observar cmo, mientras que los futuros profesores del rea de Ciencias
obtienen a nivel general puntuaciones ms altas en el componente instrumental, referido al
manejo de herramientas informticas, el futuro profesorado de Ciencias Sociales y
Humanidades obtiene puntuaciones ms altas en el componente cognitivo, referido a las
operaciones mentales que tiene que hacer el sujeto para procesar la informacin y convertirla
finalmente en conocimiento. Por otro lado, no se observan diferencias muy reseables entre
los sujetos de la muestra del rea de Ciencias Sociales y del rea de Humanidades. Por ltimo,
aplicando la prueba del anlisis de la varianza para observar las diferencias entre los sujetos
de las 3 reas de conocimiento tanto en el componente cognitivo como en el componente
instrumental, se observan diferencias significativas en ambos contrastes (Tabla 3) con un
nivel de significacin del 5% (=.05).
Tabla 3
Anlisis de varianza. Componentes del procesamiento por rea de conocimiento
Nivel autopercibido
Componente instrume ntal
Componente cognitivo
S.C
Intergrupo
Intragrupo
Total
Intergrupo
Intragrupo
Total
13.804
182.728
196.532
11.330
181.045
192.375
g.l.
C.M.
p.
2
193
195
2
193
195
6.902
0.947
7.290
.001
5.665
0.938
6.039
.003
978-84-695-8363-0
1271
Ciencias y las otras dos reas. No se localizan diferencias significativas entre las reas de
Ciencias Sociales y Humanidades (Tabla 4).
Tabla 4
Anlisis de varianza. Subconjuntos homogneos de Tukey
Componente instrume ntal
Componente cognitivo
Humanidades
Ciencias Sociales
Ciencias
-.24
.03
-
.47
-.47
.14
.11
-
Significacin
.306
1.000
1.000
.985
978-84-695-8363-0
1272
978-84-695-8363-0
1273
Hargittai, E. (2010). Digital na(t)ives? variation in internet skills and uses among members of
the next generation. Sociological Inquiry, 80(1), 92-113.
Marcelo Garca, C. (2009). Formalidad e informalidad en el proceso de aprender a ensear.
Revista de Educacin, 350, 31-55.
McLuhan, M. (1987). Understanding media: the extensions of man. London: Routledge.
Morales Vallejo, P. (2000). Medicin de actitudes en psicologa y educacin: construccin de
escalas y problemas metodolgicos. Madrid: Universidad Pontificia Comillas.
Nvoa, A. (2009). Para una formacin de profesores construida dentro de la profesin.
Revista de Educacin, 350, 203-218.
OCDE. (2004). Completing the foundation for lifelong learning. An OECD survey of upper
secondary
schools.
Disponible
en:
http://www.openisbn.com/preview/9789264103726/
Pavi Nova, A. (2011). Formacin docente: hacia una definicin del concepto de competencia
profesional docente. Revista Electrnica Interuniversitaria de Formacin del
Profesorado, 14(1), 67-80.
Pinto Molina, M. (2009). Design of the IL-HUMASS survey on information literacy in higher
education: a self-assessment approach. Journal of Information Science, 36(1), 86-103.
Prensky, M. (2009). Homo sapiens digital: from digital immigrants and digital natives to
digital
wisdom.
Disponible
en:
http://www.innovateonline.info/pdf/vol5_issue3/H._Sapiens_Digital__From_Digital_Immigrants_and_Digital_Natives_to_Digital_Wisdom.pdf
Rodrguez Conde, M. J., Olmos Miguelez, S., y Martnez Abad, F. (2012). Propiedades
mtricas y estructura dimensional de la adaptacin espaola de una escala de
evaluacin de competencia informacional autopercibida (IL-HUMASS). Revista de
Investigacin Educativa, 30(2), 347-365.
UNESCO. (2005). Towards knowledge societies. Pars: UNESCO.
Valimaa, J., y Hoffman, D. (2008). Knowledge society discourse and higher education.
Higher Education: The International Journal of Higher Education and Educational
Planning, 56(3), 265-285.
978-84-695-8363-0
1274
Resumen
En la sociedad actual, resulta necesario insistir en el potencial suponen las comunidades de
aprendizaje, dentro de una accin de gobierno ms horizontal, a travs de las zonas de
accin educativa preferente, los proyectos educativos de ciudad, etc. Por tanto, se precisa
fomentar una educacin integral, inclusiva y de calidad, con capacidad para incorporar las
distintas diversidades humanas (gnero, orientacin sexual, interculturalidad, etc.),
propiciando una autntica Educacin para la Cultura de la Paz. Adems, las constantes
informaciones sobre nuevas vctimas de la violencia, estn generando una alarma social,
especialmente ante la incursin del cyberbullying, que precisa un amplio anlisis, con rigor
cientfico y metodolgico. Los objetivos planteados en la investigacin se centran en formular
propuestas de innovacin para propiciar una convivencia pacfica y solidaria en los Centros
docentes; e identificar los elementos clave para fomentar la democracia en la Escuela y su
entorno. La metodologa es de tipo descriptiva o interpretativa, que facilita un diagnstico de
la situacin de la educacin para la democracia, la paz y la convivencia, en la sociedad
actual, ms concretamente, en el contexto de Albacete, en la Universidad de Castilla-La
Mancha, en el curso 2011-12. Respecto al mtodo, se intenta buscar el conocimiento y la
interpretacin de la realidad, para pretender mejorarla desde una perspectiva creativa e
innovadora. Los cuestionarios se han utilizado para recopilar informaciones de carcter
general y han servido de base para la elaboracin posterior de entrevistas. Entre las
conclusiones ms significativas, se destaca que la diversidad supone centrar la educacin en
principios de igualdad, justicia y libertad. Este concepto implica, ms all de la idea de
tolerancia, un autntico respeto y apreciacin de la diferencia, posibilitando las relaciones
entre las distintas culturas que confluyen en la Escuela.
Descriptores: Diversidad, Formacin del profesorado, Innovacin educativa, Cyberbullying,
Educacin para la paz.
Abstract
In today's society, it is necessary to insist on the potential to involve the communities of
learning, within a Government action more horizontal, across the areas of preferential
educational action, educational projects for city, etc. Therefore it is necessary to foster a
comprehensive, inclusive quality education, with ability to incorporate different human
diversity (gender, sexual orientation, interculturality, etc.), providing a real education for the
culture of peace. In addition, the constant information on new victims of violence, are
generating a social alarm, especially against the incursion of the cyberbullying, which
requires a broad analysis, scientific and methodological rigor. The objectives of the research
focus on proposals for innovation to promote solidarity and peaceful coexistence in schools;
(e) identify the key elements for promoting democracy at the school and its environment. The
978-84-695-8363-0
1275
Introduccin
La cultura de la participacin implica una forma comn de entender, percibir y vivir
los problemas educativos, un mtodo de trabajo que permita a la comunidad educativa la
gestin colectiva de los centros. Actualmente, a pesar de que la apertura y relacin del centro
con la comunidad educativa, an se estima insuficiente la participacin del alumnado, en
decisiones significativas de la gestin de los centros. Dicha participacin viene reconocida en
la Constitucin Espaola y en la normativa que reglamenta los centros educativos, lo que
supone un reconocimiento expreso por parte del Estado que regula los derechos
fundamentales de todos los implicados en el proceso educativo y tiene su esencia en la propia
naturaleza de la educacin.
Los problemas educativos ocupan, en los pases europeos, un papel prioritario de
reflexin social para conseguir una educacin de calidad que posibilite el desarrollo
econmico e incremente el bienestar social. En dicha labor es preciso contar con la
implicacin y compromiso de todos para avanzar en el camino hacia la igualdad y la calidad
educativa, partiendo de la base que no hay propuestas nicas o fciles para construir la
educacin inclusiva de calidad que precisa nuestro pas (Palomares y Lpez, 2012).
Los vertiginosos cambios y las ambiciosas exigencias del contexto socio-econmico,
unido a las continuas reformas del sistema educativo espaol de escaso calado o motivadas
por intereses partidistas, han profundizado en el desconcierto y provocado unas insuficientes
previsiones sobre los nuevos retos educativos. Por ello, resulta muy difcil avanzar en la
prctica real, si el debate se centra nicamente en el discurso y no se proponen reformas con
innovaciones serias, sistemticas y con suficientes recursos, coherentes con el contexto socioeconmico-poltico en que nos encontramos. Lgicamente, cualquier reforma que no
considere adecuadamente la formacin del Profesorado est abocada al fracaso.
Se parte de la base que la escuela es una sociedad democrtica, concebida como
comunidad vital, cuyo fin primordial es proporcionar el marco especfico para la educacin
sistemtica (Palomares, 2007). Por tanto, la escuela como comunidad educativa, trasciende
al medio social en el que se halla inmersa geogrficamente, estableciendo relaciones con el
medio exterior, recibiendo del mismo influjos del medio natural, social y cultural; as como,
aportando las diversas influencias formativas originadas en el centro. Por tanto, hay que
978-84-695-8363-0
1276
978-84-695-8363-0
1277
Mtodo
En las investigaciones desarrolladas se ha planteado como objetivo general: conocer
los procesos de interaccin y comunicacin en el aula, dominar destrezas y habilidades
sociales necesarias para fomentar el aprendizaje y la convivencia en el aula, y abordar
problemas de disciplina y resolucin de conflictos.
Como objetivos especficos, destacamos:
a. Disear y realizar actividades formales y no formales que contribuyan a hacer del centro
un lugar de participacin social y cultural en el entorno donde est ubicado.
b. Relacionar la educacin con el medio, y comprender la funcin educadora de la familia y
la comunidad, tanto en la adquisicin de competencias y aprendizajes como en la
educacin en el respeto de los derechos y libertades, en la equidad de derechos y
oportunidades entre hombres y mujeres y en la igualdad de trato y no discriminacin de
las personas con discapacidad.
c. Conocer la normativa y organizacin institucional del sistema educativo y modelos de
mejora de la calidad con aplicacin a los Centros educativos.
La investigacin que presentamos se incardina en las iniciadas en el ao 2011 y que se
han ido ampliando y profundizando en los dos aos siguientes, en el contexto de la
Universidad de Castilla-La Mancha, centrada en el alumnado que cursa los Estudios de Grado
de Maestro (E. Infantil y E. Primaria), participando en el curso 2011-12, una muestra de 260
alumnas y 41 alumnos.
En relacin con el tipo de investigacin, habra que destacar que confluyen teora,
desarrollo y anlisis de la misma con el propsito de proporcionar informacin, comprender,
explicar y evidenciar a travs de la utilizacin de la investigacin de tipo descriptiva o
interpretativa. Se parte de la concepcin de que los estudios descriptivos dan por resultado un
diagnstico, que -en este caso- es la conocer los procesos de interaccin y comunicacin en el
aula, desde una perspectiva reflexiva y critica. Respecto al mtodo, se entra en el
conocimiento y de interpretacin de la realidad, para intentar mejorarla. Por ello, se puede
decir que la dimensin cualitativa de la investigacin rene los criterios relacionados con la
credibilidad de la investigacin. Adems, el rigor de la investigacin est tambin
garantizado, en lo que afecta a la dimensin cuantitativa de la investigacin, la construccin
de instrumentos, el control de todo el proceso y el rigor en la recogida de la informacin. Los
cuestionarios utilizados se han pasado a las personas implicadas en el estudio, con el fin de
recopilar informaciones de carcter general y han servido de base para la elaboracin
posterior de 12 entrevistas. Por otra parte, dichas entrevistas personales han facilitado el
conocimiento de determinados aspectos no recogidos en los cuestionarios. La informacin
obtenida se ha analizado en dos fases y con dos tcnicas diferentes, siendo la primera de ellas
de tipo cuantitativo y, la segunda, preferentemente cualitativa. Los anlisis descriptivos se han
realizado mediante el programa SPSS (Versin 20), que ha facilitado en algunos casosinformacin muy concreta sobre los indicadores establecidos y el grado de cumplimiento de
cada uno de ellos. El anlisis cuantitativo ha posibilitado conocer:
a) Los intereses del alumnado respecto a la mejora de la convivencia pacfica y la
participacin democrtica en los centros educativos y en la sociedad, en general.
978-84-695-8363-0
1278
978-84-695-8363-0
1279
Resulta significativo destacar que, el 673% de los encuestados est de acuerdo con el
hecho que la crisis de valores en la propia escuela genera agresividad en los centros. Este
porcentaje se ha elevado en un 07%, respecto al ao 2011, que se situaba en un el 666%.
Las propuestas de mejora en el sistema educativo, que superan el 60%, en la
puntuacin mxima (totalmente de acuerdo), son:
a) Educar para la convivencia pacfica, la participacin democrtica desde la ms temprana
edad y el respeto de los derechos humanos.
b) Adaptar la formacin del profesorado a las exigencias de la sociedad actual, para que
pueda ser consecuente con sus ideas, planteamientos y sentimientos
c) Cumplir una funcin social esencial, partiendo de la estrecha relacin entre sistema
educativo, sistema productivo y sociedad.
d) Cooperar para la adecuada incorporacin del alumnado al mundo del trabajo y a la vida
cotidiana.
e) Regirse por principios democrticos.
f) Introducir el debate y la reflexin crtica en las aulas.
g) Respetar la pluralidad existente en la sociedad.
h) Garantizar el respeto a la diversidad.
La interiorizacin de las pautas de conducta imperantes en nuestra sociedad y la autorepresin sistemtica que ellas representan son posiblemente los apartados ideolgicos ms
ocultos y eficaces del Estado, al ser refrendados tcitamente por la familia del alumnado. De
mantenerse esta situacin, el sistema de domesticacin industrial de seres humanos sumisos
deja escasas esperanzas para que nuestra futura ciudadana sea feliz, solidaria y
autnticamente responsable.
Discusin
La educacin en valores debe atender todas las dimensiones de la persona humana, en
sus relaciones con los dems y en las exigencias sociales que permiten participar plenamente
en una sociedad democrtica, por lo que se precisa una atencin complementaria y
suplementaria a la formacin impartida en las diferentes reas del currculo, partiendo de la
base que en todas ellas- se considera que los valores que guan la accin son justos y
potencialmente universales para la formacin ntegra de la persona (Palomares, 2012).
Resulta evidente que, la falta de la participacin democrtica del alumnado, favorece
un aumento progresivo de casos de maltrato entre iguales (bullying) y que cada vez suelen ser
ms pequeos los alumnos acosados. Por ello, habra que destacar la interesada pasividad
ante las posibles situaciones de acoso. En este sentido en el tem 8 del cuestionario, se les
preguntaba si haban actuado cuando han detectado algn caso de acoso y, solamente un 6%,
contesta afirmativamente.
978-84-695-8363-0
1280
978-84-695-8363-0
1281
Disear los objetivos que pretende un Centro educativo con su apertura a la comunidad.
f)
g)
h) Disear una actividad formativa para los padres y madres para fomentar su participacin
en la gestin de un Centro educativo.
i)
Especificar algunas medidas para que los padres y madres puedan trabajar por la
convivencia en los Centros.
j)
Disear y aplicar una Encuesta a padres y madres en la que se reflejen las dificultades
que encuentran para una mayor y mejor participacin en los Centros educativos.
Referencias
978-84-695-8363-0
1282
978-84-695-8363-0
1283
Resumen
Estudiamos la relacin entre las actitudes hacia las TIC (Tecnologas de la Informacin y
Comunicacin) con el cuestionario de INNOVATIC-PROFORMS y la metodologa docente en
los profesores en formacin cuestionario CEMEDEPU (Gargallo et al., 2011). Aspectos
vinculados al proceso de integracin de las TIC en la enseanza. La muestra est formada
por 311 alumnos del Master de Secundaria de la UV. A partir de las puntuaciones medias del
CEMEDEPU se realiz un cluster identificando 4 grupos. Estos presentan diferencias
significativas (ANOVAs) en: disposicin a usar las TIC, ansiedad y autoeficacia. Podemos
concluir que existe relacin entre el modelo docente y las actitudes hacia las TIC, siendo ms
positiva en los cercanos a una metodologa centrada en el aprendizaje. Pensamos que hay un
componente de deseabilidad social en los preprofesores de secundaria en relacin al
constructivismo y a la metodologa centrada en el aprendizaje.
Descriptores: profesorado en formacin, metodologa docente, actitudes TIC, educacin
secundaria.
Abstract
The aim of this study is to examine the relationship between attitudes toward ICT
(Information and Communication) with INNOVATIC-PROFORMS questionnaire- and
teaching methodology in pre-service teachers -CEMEDEPU questionnaire (Gargallo et al.,
2011). Aspects related to the ICT integration of in teaching. A sample of 311 pre-service
teachers -students of the Master of Secondary Education Teachers, UV. Based on the mean
scores of CEMEDEPU was conducted a cluster analysis, identified 4 groups. These groups
show significant differences (ANOVA) in: intention to use ICT, anxiety and self-efficacy. We
conclude that there is a relationship between the methodological model and attitudes towards
ICT, being more positive in close to a learner-centered methodology. We think there is a
component of social desirability in the pre-service teachers in relation to constructivism and
learner-centered methodology.
Keywords: pre-service teachers, teaching methods, attitudes, ICT (Information and
Communications Technologies), Secondary Education.
978-84-695-8363-0
1284
Introduccin
Al hablar de la integracin de las Tecnologas de la Informacin y la Comunicacin
(TIC) en el proceso de enseanza aprendizaje hay una serie de aspectos que son muy
importantes como son las competencias pedaggicas y tecnolgicas del profesorado
(Buabeng-Andoh, 2012; Ertmer y Ottenbreif-Leftwich, 2010; Surez, Almerich, Gargallo y
Aliaga, 2011). El profesor es el pilar bsico para que se produzca una buena integracin de las
TIC. Sin su participacin es imposible implementar estos recursos en el aula de una manera
adecuada.. Consiguientemente, el uso que hace el profesorado de estos recursos es un aspecto
fundamental, para comprender cmo realmente se integran estos recursos en la prctica
educativa.
En los ltimos aos, diferentes estudios (Almerich, Surez, Belloch y Orellana, 2010a;
Becker, Ravitz y Wong, 1999; Condie, Munro, Muir y Collins, 2005; Empirica, 2006;
Eteokleous, 2008; IEAE, 2007; Muir-Herzing, 2004; ODwyer, Russell y Bebell, 2004;
Sigals et al., 2008; Surez, Almerich, Gargallo y Aliaga, 2010; Tondeur, van Braak y
Valcke, 2007; van Braak, Tondeur y Valcke, 2004) han analizado el uso que realiza el
profesorado de las TIC en sus prcticas diarias. Diversos trabajos apuntan la necesidad de
estudiar otros factores que guardan relacin con las competencias y el uso y que juegan un
papel modulador en la integracin de las TIC en el proceso de enseanza (Almerich, Surez,
Orellana y Daz, 2010). Estas variables seran las actitudes (Orellana et al, 2003; Orellana,
Almerich, Belloch y Daz, 2004; Gargallo, Surez y Almerich, 2006; Tejedor y Garca
Valcarcer, 2006; Yuen y Ma, 2008), las creencias pedaggicas del profesorado (Orellana,
Gonzalez-Gmez, Sobrecases y Sez, 2005; Ertmer, 2005; Boza, Tirado y Guzmn-Franco,
2010, Faghiharam, et al, 2012), o el bienestar emocional del profesorado (De Pablos,
Gonzlez y Gonzlez, 2008). Todo ello nos proporcionara una mejor comprensin del
proceso de integracin de las TIC.
En este trabajo nos planteamos conocer qu modelos docentes prefieren el futuro
profesorado de secundaria, estudiantes del Mster Universitario de Profesorado en Educacin
Secundaria, y si esto guarda relacin con la actitud hacia las TIC en el proceso de enseanzaaprendizaje. Ya que ambos juegan un rol modulador en la integracin.
Mtodo
El diseo de estudio utilizado es un estudio de encuesta de tipo transversal. La muestra
est constituida por 331 estudiantes del Mster Universitario de Profesorado en Educacin
Secundaria de la Universidad de Valencia, cuyas caractersticas definitorias esenciales se
encuentran en la tabla 1. El tipo de muestreo utilizado es un muestreo accidental.
Tabla 1
Caractersticas de la muestra
Gnero
Edad
Disponibilidad de ordenador en casa
Disponibilidad de Internet en casa
Chicas: 62,7%
Chicos: 37,3%
Edad media: 29,1
Rango: 21-56
S: 99,7%
No: 0,3%
S: 98,1%
No: 1,9%
978-84-695-8363-0
1285
Denominacin
MDEAF1
MDEAF2
MDEAF3
Denominacin
MDEBF1
MDEBF2
MDEBF3
MDEBF4
978-84-695-8363-0
1286
Media
Mediana
Desv. tp.
CV
3,5644
4,4925
4,5252
3,6844
3,9185
1,9903
4,0549
130,26
3,6000
4,7500
4,6667
3,6667
4,0000
2,0000
4,2500
133,00
,49987
,59856
,58474
,70669
,58128
,93038
,81811
15,637
14,02
13,32
12,92
19,18
14,83
46,75
20,18
12,00
Media
Mediana
Desv. tp.
CV
2,8550
3,0000
,79924
27,99
3,4359
3,5000
,78629
22,88
2,3426
2,3333
,73713
31,47
4,2476
4,1429
,43256
10,18
3,5847
3,5000
,44114
12,31
4,2541
4,2500
,45379
10,67
978-84-695-8363-0
Dimensiones
MDEAF1: Concepcin tradicional del
conocimiento y del aprendizaje
Escala A: Modelo
Centrado en la MDEAF2: Concepcin tradicional de la
enseanza y del papel del profesor
Enseanza
MDEAF3: Uso de mtodos de enseanza y
evaluacin tradicionales
MDEBF1: Concepcin activa y constructiva
de la enseanza y actuacin coherente
MDEBF2: El conocimiento como
construccin. Concepcin constructivista del
aprendizaje.
MDEBF3: Interaccin eficaz con los
estudiantes, en tutoras, seminarios, uso de
las TICs, etc
MDEBF4: Uso de metodologas de
evaluacin de tipo formativo
1287
Media
Mediana
Desv. tp.
CV
2,8550
3,0000
,79924
27,99
3,4359
3,5000
,78629
22,88
2,3426
2,3333
,73713
31,47
4,2476
4,1429
,43256
10,18
3,5847
3,5000
,44114
12,31
4,2541
4,2500
,45379
10,67
4,1189
4,0000
,50429
12,24
Para ver los diferentes perfiles en metodologa docente y tomando una decisin
parsimnica optamos por la solucin de 4 grupos. Las diferencias entre grupos (ANOVA)
para cada dimensin son todas significativas. Como vemos en la tabla 6 los grupos estn
bastante compensados.
Tabla 6
Porcentajes
20,2
27,7
21,2
30,9
Cuando miramos las puntuaciones medias en cada una de estas dimensiones en los
cuatro grupos del cluster- ver grfica 1- podemos observar que es en las puntuaciones de la
escala A modelo centrado en la enseanza donde los cuatro grupos se escalan claramente.
El grupo 1 est formado por los sujetos que puntan ms alto en esta escala, seran los
tradicionales, ms cercanos a una metodologa centrada en el profesor. El grupo 2, sera el
opuesto, puntuando en torno al 2 en las tres dimensiones. Los sujetos de los grupos 3 y 4,
seran los intermedios, diferencindose en el factor 2 (concepcin de la enseanza y papel del
profesor) presentando puntuaciones ms altas el grupo 3. Es necesario sealar que se aprecian
perfiles semejantes en los cuatro grupos.
Las diferencias, entre los grupos, en la escala B (modelo centrado en el aprendizaje),
no son tan claras. Por otro lado, sera esperable una inversin en el orden de los grupos y esta
no se produce, los grupos intermedios en la escala A pasan a ser los extremos. Es el grupo 3 el
que presenta puntuaciones ms altas en las cuatro dimensiones y el grupo 4 ms bajas. Siendo
el grupo 1 y 2 los intermedios. Es necesario sealar que los perfiles son similares y las
diferencias entre grupos menores que en la escala A.
978-84-695-8363-0
1288
3
1
2
3
4
1
MDEAF2:
MDEAF1:
Concepcin
Concepcin
tradicional del tradicional de la
conocimiento y enseanza y del
del aprendizaje papel del
profesor
MDEBF4: Uso
MDEBF3:
MDEBF2: El
MDEBF1:
de
Concepcin conocimiento Interaccin
eficaz con los metodologas
como
activa y
constructiva de construccin. estudiantes, en de evaluacin
de tipo
tutoras,
la enseanza y Concepcin
constructivista seminarios, uso formativo
actuacin
coherente del aprendizaje. de las TICs, etc
MDEAF3: Uso
de mtodos de
enseanza y
evaluacin
tradicionales
Grfica 1. Puntuaciones medias en las dimensiones que componen las Escalas A y B de los modelos
de Enseanza-Aprendizaje para los diferentes grupos
En relacin a las actitudes, como ya hemos sealado, estas son bastante buenas. A
partir de los grupos formados en funcin del modelo docente realizamos Anlisis de Varianza
para cada una de las dimensiones de las Actitudes hacia las TIC ver tabla 7- presentando
diferencias significativas las dimensiones: Disposicin a utilizar las TIC, Ansiedad y
autoeficacia.
Tabla 7
Resultados de los ANOVA para cada dimensin de la Escala de Actitudes y las pruebas post
hoc entre grupos
F
gl
Sig
Atribuciones externas
,614
,607
Eta al cuadrado
parcial
,006
Atribuciones internas
1,940
,123
,019
4,837
,003
,046
,187
,905
,002
1,890
,131
,018
4,270
,006
,041
4,981
,002
,047
Comparaciones
mltiples
1-3
2-3
1-3
1-4
2-3
2-4
978-84-695-8363-0
1289
1
2
2
3
4
1
Atribuciones
Externas
Atribuciones
Internas
Disposicin a
usar las TIC
Ansiedad
Autoeficacia
Grfica 2. Puntuaciones medias en las dimensiones que componen las Escalas de Actitudes hacia las
TIC para cada uno de los grupos creados en funcin de los modelos de Enseanza-Aprendizaje
Discusin
Es alentador el ver las actitudes tan positivas que tienen los futuros profesores de
Educacin Secundaria hacia las TIC y su inclinacin a un modelo de enseanza-aprendizaje
centrado en el alumno. Sin embargo, no debemos pecar de optimistas, ya que algunos de estos
resultados pueden estar sesgados debido a la deseabilidad social, durante su formacin en el
Master se les habla continuamente del constructivismo y del aprendizaje activo. Una muestra
de esta posibilidad es que, en el modelo centrado en la enseanza, la dimensin que obtiene la
mayor puntuacin es la Concepcin tradicional de la enseanza y del papel del profesor y en
el modelo centrado en el aprendizaje la puntuacin ms baja es en: el conocimiento como
construccin. Concepcin constructivista del aprendizaje. Pensamos que queda mucho
camino por recorrer y que sera necesaria una mayor formacin pedaggica en la utilizacin
de las TIC en el proceso de enseanza-aprendizaje, en el Master est concebida como
transversal, pero de esta manera no nos aseguramos una integracin de las TIC de calidad
(Almerich, et al, 2010b, Almerich, et al 2011, Buabeng-Andoh, 2012)
978-84-695-8363-0
1290
Referencias
Almerich, G. Surez, J. M. Belloch, C. y Orellana, N. (2010a). Perfiles del profesorado a
partir del conocimiento de los recursos tecnolgicos y su relacin con el uso que hacen
de estas tecnologas. Revista Complutense de Educacin, 21(2), 247-269.
Almerich, G. Surez, J. M. Orellana, N y Daz, M.I. (2010b). La relacin entre la integracin
de las tecnologas de la informacin y comunicacin y su conocimiento. Revista de
Investigacin Educativa, 28(1), 31-50.
Almerich, G. Surez-Rodrguez, J. M., Belloch, C. y Bo, R. M. (2011). Las necesidades
formativas del profesorado en TIC: perfiles formativos y elementos de
complejidad. Disponible
en:
http://www.uv.es/RELIEVE/v17n2/RELIEVEv17n2_1.htm Fecha de consulta:
27/09/2011.
Almerich, G., Surez, J.M., Jornet, J.M. y Orellana, N. (2011). Las competencias y el uso de
las Tecnologas de la Informacin y Comunicacin por el profesorado: estructura
dimensional.
Disponible
en:
http://redie.uabc.mx/vol13no1/contenidoalmerichsuarez.html Fecha de consulta: 14/07/2011.
Area, M. (2010). El proceso de integracin y uso pedaggico de las TIC en los centros
educativos. Un estudio de casos. Revista de Educacin, 352, 77-97.
BECTA (2004). A review of the research literature on barriers to the uptake of ICT by
teachers. Disponible en: http://www.becta.org.uk Fecha de consulta: 15/05/2010.
Boza, ., Tirado, R. y Guzmn-Franco, M. D. (2010). Creencias del profesorado sobre el
significado de la tecnologa en la enseanza: influencia para su insercin en los
centros docentes andaluces. Disponible en: http://www.uv.es/RELIEVE/v16n1
/RELIEVEv16n1_5.htm Fecha de consulta: 20/09/2011.
Buabeng-Andoh, C (2012). Factors influencing teachers adoption and integration of
information and communication technology into teaching: a review of the literature.
International Journal of Education and Development Using Information and
Communication Technology, 8(1), 136-155.
De Pablos, J.; Cols, P. y Gonzlez, T. (2010). Factores facilitadores de la innovacin con
TIC en los centros escolares. Un anlisis comparativo entre las diferentes polticas
educativas autonmicas. Revista de Educacin, 352, 23-51
De Pablos, J.; Gonzlez, T. y Gonzlez, A. (2008). El bienestar emocional del profesorado en
los centros TIC como factor de innovacin educativa. Revista Latinoamericana de
Tecnologa Educativa, 7(2), 45-55.
Empirica (2006). Benchmarking Access and Use of ICT in European Schools 2006.
Disponible
en:
http://ec.europa.eu/information_society/eeurope/i2010/docs/studies/final_report_3.pdf
Fecha de consulta: 20/05/2007.
978-84-695-8363-0
1291
978-84-695-8363-0
1292
Tejedor, F.J. y Garca-Valcrcel, A. (2006). Competencias de los profesores para el uso de las
TIC en la enseanza. Anlisis de sus conocimientos y actitudes. Revista Espaola de
Pedagoga, 233, 21-44.
Yuen, A.H.K. & Ma, W.W.K. (2008). Exploring teacher acceptance of e-learning technology.
Asia-Pacific Journal of Teacher Education, 36(3), 229-243.
978-84-695-8363-0
1293
Resumen
En este trabajo presentamos el desarrollo de un proyecto de innovacin en el que, a travs de
las TIC y el trabajo colaborativo entre estudiantes y docentes, se ha elaborado un catlogo
de centros en los que se realizan las Prcticas Externas del Grado en Pedagoga. Se ha
desarrollado en el Aula Virtual de la Asignatura de Prcticas Externas II para el desarrollo
del trabajo colaborativo y la evaluacin formativa. Los docentes han proporcionado
informacin y tutoriales sobre el uso de distintos recursos tecnolgicos, al tiempo que han
ido supervisando y guiando la realizacin de los trabajos. Las alumnas han ido compartiendo
los trabajos realizados en las diferentes instituciones de prcticas, valorando y aportando
sugerencias a los trabajos presentados por el resto de compaeras. Los materiales
elaborados van a ser utilizados, para dar a conocer los contextos profesionales en los que el
pedagogo puede desarrollar sus funciones.
Descriptores: Tecnologas de la Informacin y la Comunicacin; Prcticas Externas; Grado
en Pedagoga; Contextos Profesionales.
Abstract
In this work we show the development of an innovation project, in which across the use of
Information and Communication Technology (ICT) and the collaborative work between
students with teachers, we have made a center index where students can to do their Pedagogy
professional training. For this project we used like resource the virtual platform of university.
Teachers have provided information and tutorial for the use of technological resources and
have been supervising and guiding making work as well. The students have been sharing the
works that they have made in different training centers. They have valued and contributed
suggestions to the works showed for other students. The elaborated materials are going to be
use the next year whit another beginner students for will show the professional context where
Pedagogy professional can develop its functions.
Keywords: Information and Communications Technology; Professional Training; Pedagogy
Degree; Professional Contexts.
978-84-695-8363-0
1294
Introduccin
Una de las particularidades del espacio europeo de educacin superior (EEES) es
considerar los ttulos universitarios en trminos de resultados de aprendizaje y,
fundamentalmente, formulados a travs de competencias. Las competencias simbolizan una
composicin dinmica de atributos como el conocimiento y su aplicacin, actitudes y
responsabilidades que describen los resultados del aprendizaje de un determinado programa, o
cmo el alumnado ser capaz de desenvolverse al finalizar el proceso educativo formal
(Gnzalez & Wagenaar, 2005). Asimismo dentro del modelo educativo del EESS se
diferencia entre competencias transversales y competencias especficas. Las competencias
transversales o estn relacionadas con el desarrollo personal, no obedecen a un mbito
temtico o disciplinario especfico sino que incluyen todos los campos de la accin
profesional y acadmica. Perrenoud (1997) relaza las competencias transversales como parte
de las caractersticas generales de la accin humana en entornos comunicativos y tcnicos. En
este sentido, el modelo del EESS anticipa la capacidad de aprender a aprender en un
contexto interactivo, caracterizado por el trabajo en equipo y la implicacin comprometida del
alumno en su propio aprendizaje. El concepto de trabajo colaborativo, ha sido ampliamente
investigado a lo largo del tiempo. Salmon (2002) entiende la colaboracin como el modo de
compartir activamente la informacin y los recursos intelectuales entre los participantes. Es
por ello que los proyectos colaborativos experimentan un notable impulso con la utilizacin
de las tecnologas de la informacin y la comunicacin (TIC).
Las TIC definidas como el conjunto de tecnologas que permiten la adquisicin,
produccin, almacenamiento, tratamiento, transmisin, registro y presentacin de
informacin, en formato de sonido, imgenes y datos (Garca-Valcarcel, 2003). As, las TIC
permiten crear entornos simblicos que pueden ser utilizados para planificar, regular y
orientar las actividades propias y ajenas, introduciendo modificaciones importantes en el
proceso de enseanza-aprendizaje. Si bien es incuestionable el considerable potencial que
supone para el desarrollo de la docencia, la gestin y la investigacin, tambin representa un
reto para los estudiantes, ya que va ms all de cambio de herramientas, implicando una
nueva concepcin hacia un modelo de trabajo colaborativo y conjunto.
Townsend (1998) circunscribe el trabajo virtual a la dispersin de los usuarios que
articulan el uso de las TIC para llevar a cabo una tarea. En esta lnea entendemos la
colaboracin virtual como la ayuda de las TIC para grupos geogrficamente dispersos con
muy poca o ninguna comunicacin real. Mediante la creacin de un espacio de trabajo de
colaboracin virtual, las organizaciones tambin pueden darse cuenta de la sinergia
competitiva de trabajo en equipo, as como explotar los beneficios de las TIC (Harasim, 1993;
Kock, 2000). En esta lnea Cabero (2007), afirma que la creacin de espacios virtuales
colaborativos puede constituir una estrategia de aprendizaje para la educacin en la que
grupos de trabajo intercambian sus investigaciones aprendiendo a trabajar de manera
productiva con el recurso de las nuevas tecnologas. En este contexto se halla la utilizacin de
las plataformas virtuales, entendidas como espacios virtuales de aprendizaje que integran las
herramientas y recursos necesarios para gestionar los programas y recursos de formacin a
travs de Internet, requieren ser analizadas y valoradas desde concepciones psicodidcticas
que permitan su evaluacin desde criterios especficamente educativos. Respecto al anlisis
de las posibilidades tecnolgicas y pedaggicas que nos ofrecen las herramientas virtuales,
podemos encontrar referencias en los trabajos de De Benito (2002).
978-84-695-8363-0
1295
978-84-695-8363-0
1296
Mtodo
Objetivos
La finalidad de este proyecto es utilizar las TIC para elaborar un catlogo de centros
en los que se realizan las Prcticas Externas en el Grado en Pedagoga para ampliar la
informacin que los estudiantes tienen sobre los contextos profesionales de intervencin. As,
se dar a conocer los contextos laborales en los que el profesional de la Pedagoga puede
desarrollar sus funciones, estableciendo sus rasgos ms caractersticos y detallando las
funciones que dicho profesional desempea en cada contexto. Toda esta informacin ser
elaborada por los estudiantes que han acudido a cada contexto concreto y se compartir con
todos los estudiantes que cursan esta asignatura, utilizando para ello el Aula Virtual de esta
asignatura.
Objetivo general:
Desarrollar la competencia transversal Ser capaz de gestionar la informacin y el
conocimiento en su mbito disciplinar, incluyendo saber utilizar como usuario las
herramientas bsicas en TIC, a travs de la implementacin de un proyecto de innovacin en
el uso y manejo de las TIC en la asignatura Prcticas Escolares II del Grado en Pedagoga.
Objetivos especficos:
1. Conocer el grado de manejo de la competencia transversal referida al dominio de las TIC
antes del desarrollo de la asignatura Prcticas Escolares II.
2. Fomentar el uso de la plataforma virtual de la UMU, Aula Virtual, a travs de la
herramienta Foro, para mostrar sus avances en TIC a sus compaeros e intercambiar
opiniones y comunicarse con ellos sobre el contenido de su tarea.
3. Explorar el desarrollo de la competencia transversal referida al dominio de las TIC despus
de haber cursado la asignatura Prcticas Externas II.
Fases del proyecto
El proyecto del que parte esta comunicacin ha constado de tres fases en su desarrollo.
Una primera fase de Conocimiento del contexto laboral; una segunda fase centrada en
describir las Funciones que desempea el profesional de la Pedagoga y una tercera fase,
en la que se centra el trabajo que presentamos, sobre el Diseo de materiales digitales para
compartir la experiencia de prcticas a travs del Aula Virtual. En esta ltima fase, cada
estudiante ha realizado y publicado en el Aula Virtual la informacin que ha elaborado sobre
la institucin de prcticas a la que ha asistido. De este modo se comparte esta informacin con
el resto de compaeras, siendo todas las estudiantes conocedoras de un amplio y variado
nmero de instituciones en las que puede desarrollar su labor el profesional de la Pedagoga.
Para desarrollar esta tarea se sugiri a las estudiantes el uso de cualquier aplicacin TIC, que
permitiera realizar presentaciones, entre las que se encuentran: Prezzi, Zoho Show,
SlideShare, Animoto, Empressr, Imageloop, myPlick, Spresent. AuthorStream. Adems, en el
Aula Virtual se colgaron enlaces con tutoriales sobre algunas de esas herramientas TIC.
978-84-695-8363-0
1297
Participantes
De los 81 estudiantes matriculados el presente curso en la asignatura de Prcticas
Escolares II del Grado en Pedagoga, se invit a participar en este proyecto a 15 alumnas, que
han sido tuteladas en dicha asignatura por las tres docentes que han desarrollado el proyecto
de innovacin. Todas las participantes son alumnas de cuarto curso de Grado en Pedagoga, y
tienen menos de 25 aos de edad. Once de ellas (73,3%) manifiesta tener una experiencia de
entre 3 y 9 aos en el manejo y uso de las TIC, mientras que 3 alumnas afirman que su
experiencia en TIC es superior a 9 aos, y tan slo una manifiesta tener una breve experiencia
en TIC, inferior a 3 aos. Al cuestionario inicial y en el desarrollo de actividades
colaborativas en el Aula Virtual han participado las 15 estudiantes, mientras que el
cuestionario final ha sido completado por 12 estudiantes.
Instrumentos
Para la recogida de informacin se han diseado dos cuestionarios ad hoc:
cuestionario de evaluacin inicial sobre utilizacin de las TIC y cuestionario de evaluacin
final sobre utilizacin de las TIC en la asignatura de Prcticas Externas II. Ambos son
annimos y contienen dos variables independientes (sexo y edad).
El cuestionario de evaluacin inicial recoge 41 tems cerrados, 19 de los cuales tienen
cinco opciones de respuesta y el resto presentan cuatro opciones de respuesta, que indican
gradacin, intensidad o frecuencia. El cuestionario de evaluacin final consta de 34 tems
cerrados, 19 de los cuales presentan cinco opciones de respuesta y el resto cuatro opciones. La
ltima cuestin de ambos instrumentos es abierta (observaciones). Los tems cerrados se
agrupan en las siguientes dimensiones o bloques: Aos de experiencia en utilizacin de las
TIC. Competencias bsicas sobre TIC (conceptos bsicos y conocimientos disponibles para
elegir un recurso, antes y despus de cursar la asignatura de Prcticas Escolares II-PE
II).Grado de autonoma y autoaprendizaje en el manejo de las TIC (antes y despus de cursar
PE II). Nivel de conocimiento de distintos recursos, herramientas y aplicaciones TIC y
frecuencia de uso en los estudios de Pedagoga y frecuencia de uso en la asignatura PE II.
Criterios tenidos en cuenta para eleccin de recursos TIC (antes y despus de cursar PE II).
Frecuencia de uso de recursos de software libre (despus de cursar PE II). Para el desarrollo
de la competencia de trabajo colaborativo a travs de las TIC hemos empleado la herramienta
Foros del Aula Virtual, en la que tanto alumnas como docentes han ido registrando
comentarios a cada hilo temtico creado previamente, en funcin de los centros en los que se
han realizado las PE II.
Anlisis de resultados
A continuacin presentamos los resultados obtenidos para cada uno de los objetivos
especficos planteados.
Objetivo 1. Conocer el grado de manejo de la competencia transversal referida al dominio de
las TIC antes del desarrollo de la asignatura Prcticas Escolares II (cuestionario inicial)
Las alumnas participantes valoran su grado de competencia en conceptos bsicos
sobre las TIC entre las categoras Elemental (46,7%) e Intermedio (53,3%), no existiendo
ninguna alumna que considere su nivel Nulo ni Excelente. Por tanto, su percepcin de su
nivel de competencia se situara en un nivel medio-bajo (Tabla 1).
978-84-695-8363-0
1298
13,3
Algunas
veces
Frec. %
5
33,3
Casi
siempre
Frec. %
7
46,7
12
6,7
11
80,0
Siempre
Frec.
3
%
20,0
73,3
26,7
6,7
6,7
53,3
33,3
46,7
33,3
20,0
12
80,0
13,3
6,7
En relacin a las vas a travs de las cuales suelen conocer las TIC, se dividen entre
quienes indican que a travs de las clases que reciben en la Universidad (46,7%) y a travs de
sus compaeros (46,7%), siendo slo una alumna quien seala que investiga en la red sobre
nuevos recursos
Entre los recursos TIC que ms indican conocer destacan las redes sociales (60% con
nivel de experto), seguidas de herramientas de bsqueda de informacin (26,7% nivel de
experto) y aulas y campus virtuales (20% nivel de experto). Entre los menos conocidos y con
un menor nivel de dominio, encontramos los editores de vdeo, herramientas de trabajo
colaborativo y herramientas de publicacin de la informacin.
Las participantes indican utilizar siempre (40%) o casi siempre (40%)
herramientas TIC para el desarrollo de trabajos de las distintas asignaturas. En concreto, las
herramientas que ms utilizan son: Aulas y campus virtuales y herramientas de bsqueda de
informacin (indican usarlas siempre ms de la mitad de las participantes), seguidas de
Editores de texto y Editores de presentaciones (sealan usarlos siempre el 40% de las
estudiantes en cada caso). Mientras que el uso de Editores de vdeo y herramientas de
978-84-695-8363-0
1299
13,3
6,7
Pocas veces
Frec.
2
1
13,3
6,7
7
1
46,7
6,7
Algunas
veces
Frec. %
4
26,7
3
20,0
6
40,0
3
20,0
5
33,3
6
40,0
Bastantes
veces
Frec. %
7
46,7
2
13,3
2
13,3
6
40,0
1
6,7
6
40,0
Siempre
Frec.
4
8
6
6
%
26,7
53,3
40,0
40,0
13,3
6,7
40,0
53,3
40,0
40,0
13,3
6,7
13,3
46,7
26,7
6,7
6,7
46,7
26,7
20,0
Pster de actividad
19 mensajes
23 mensajes
18 mensajes
12 mensajes
10 mensajes
4 mensajes
8 mensajes
13 mensajes
107 mensajes
978-84-695-8363-0
1300
(16,7%). El 100% de las participantes manifiesta que ha conocido los recursos TIC que ha
utilizado en el desarrollo de esta asignatura, a travs de las docentes que han tutelado las PE
II, durante los seminarios celebrados en la Facultad de Educacin. La mayora de las
participantes indica que ha participado Siempre en el foro del Aula Virtual (80%) y la mitad
de ellas valora que ha aprendido Siempre a manejar las TIC de forma autnoma (Tabla 4).
Tabla 4
Grado de autonoma y autoaprendizaje en el manejo de las TIC tras cursar PE II
Nunca
Has realizado una bsqueda sobre nuevos recursos
y/o aplicaciones TIC para realizar las tareas
Has decidido utilizar aquellos recursos y/o
aplicaciones TIC que ya dominabas
Has aprendido a manejar herramientas y
aplicaciones TIC de forma autnoma
Has utilizado tutoriales o videotutoriales para
aprender a usar herramientas y/o aplicaciones TIC
que no manejabas
Has participado en el foro de aula virtual para
comentar los trabajos de los compaeros
Frec.
Algunas
veces
Frec. %
Casi
siempre
Frec. %
Siempre
Frec.
33,3
41,7
16,7
8,3
50,0
33,3
16,7
8,3
41,7
50,0
50,0
33,3
16,7
16,7
16,7
66,7
978-84-695-8363-0
1301
Discusin y conclusiones
Bang J., D. C. (2000). The challenge of ICT to university education. Networking virtual and
collaborative learning. Lisbon: A.R Trinidade.
Cabero, J. (2007). Tecnologa educativa . Espaa: McGrau Hill .
Collis, B. (2002). Information technologies for education and training. En B. H. Adelsberger
(Coord.), Handbook on information technologies for education and training (pp. 119.). Berlin: Springer Verlag.
De Benito, B. (2002). Webtools: aplicaciones para sistemas virtuales de formacin. En L. A.
(Dirs.), Educar en red. Internet como recursos para la educacin (pp. 175-198).
Mlaga: Aljibe.
Garca-Valcrcel, A. (2003). Tecnologa educativa. Espaa: La Muralla.
Gnzalez, J., y Wagenaar, R. (2005). Tunning educational structures in Europe II:
universities' constitution the Bologna process. Bilbao: Publicaciones de la Universidad
de Deusto.
Harasim, L. (1993). Global networks: computers and international communications.
Cambridge: MA: MIT Press.
Kock, N. (2000). Benefits for virtual organizations from distributed groups. Communications
of the ACM, 43(11), 107-112.
Perrenoud, P. (1997). Construire des comptences ds l'cole. Pars: ESF Editeur .
Resnick, M. (2002). Rethinking learning in the digital age. En M. Resnick (Coord.), In the
global information technology report: readiness for the networked world. Oxford
University Press: G. Kirkman.
Salmon, G. (2002). E-tivities. The key to active online learning. UK: Ruthledge-Falmer Ed.
Townsend, A. M. (1998). Virtual teams: technology and the workplace of the future. The
Academy of Management Executive, 12(3), 17-29.
978-84-695-8363-0
1302
47
Esta comunicacin forma parte del proyecto de investigacin Visiones y Prcticas del profesorado ante el
Programa Escuela 2.0. Un anlisis comparado entre comunidades autnomas, financiado en el marco del Plan
Nacional I+D+i del Ministerio de Ciencia e Innovacin (Ref. EDU 2010-17037). Investigador Principal: Manuel
Area.
978-84-695-8363-0
1303
Introduccin
La sociedad actual ha entrado repleta de nuevas perspectivas y formas de entender la
formacin de los docentes, derivadas de la nueva realidad social, de los cambios y la
evolucin acelerada del conocimiento en los que estamos inmersos en los ltimos tiempos.
Asistimos a un cambio de visin con la que percibimos la escuela actual, que provocan
cambios importantes en la educacin. Parece imponerse entonces, la necesidad de la
activacin y actualizacin del manejo y uso de las Tecnologas de la Informacin y de la
Comunicacin (TICs en adelante) en las aulas con el objetivo de alcanzar una forma nueva de
organizar el currculum, menos fragmentada y una apuesta firme por un trabajo colaborativo
que implique a todos los actores de la enseanza.
La figura del profesor es un eje clave y relevante en los procesos de implementacin de
cualquier poltica educativa, y en particular las que tienen como objetivo la incorporacin de
las tecnologas digitales. Hay muchos trabajos que avalan y recogen este proceso, como los de
Inan y Lowter (2010), que ponen de manifiesto que los factores vinculados con los docentes
son los que influyen ms decisivamente en la integracin escolar de las TIC. De acuerdo con
los resultados de la investigacin, estos factores vendran a ser: las creencias del profesorado
sobre el potencial impacto de las TIC y el uso e integracin de las mismas en su prctica, el
desarrollo profesional, las capacidades y habilidades de los docentes, el apoyo recibido de la
administracin y de la comunidad educativa, la disponibilidad y adecuacin de la tecnologa
en sus escuelas son esenciales para poder obtener un xito en este campo.
Otras investigaciones, como las de Vanderlinde, Braak y Dexter (2012) indagaron sobre
las polticas TIC desarrolladas en Educacin Primaria en Blgica a travs de un estudio de
casos en donde exploraron visiones y prcticas del profesorado en sus centros. Y de forma
similar Toundeur y otros (2008) a travs de encuesta al profesorado de Educacin Bsica
constataron que las creencias y visiones pedaggicas influyen en el tipo de prctica que
desarrollan los docentes en el aula con las TIC.
Otros estudios recientes desarrollados en mbito espaol sobre las visiones y prcticas
docentes de uso de las tecnologas en los contextos escolares aportan semejantes perspectivas.
As ocurre con los trabajos de De Pablos, Colas y Gonzlez (2010); Alonso y otros (2010);
Garca (2012), Area (2010, 2011); Valverde, Garrido y Sosa (2010); Garca-Valcrcel y
Tejedor (2010), integrados en el monogrfico de la Revista de Educacin coordinado por
Sancho y Correa (2010). Y tambin De Pablos, Area, Valverde y Correa (2010), libro en el
que se explora la vinculacin entre polticas educativas en distintos territorios de Espaa y las
buenas prcticas de aula con las TIC.
Articulacin del Plan Canario de Formacin del Profesorado en TIC
Podemos decir que en Canarias existe una trayectoria de implantacin de programas
educativos de incorporacin de la informtica/tecnologa digital al mbito escolar de casi tres
dcadas. Es bueno y sano recordar el programa BACO, as como el programa MEDUSA,
realmente importante en Canarias. En los ltimos aos se quiso dar otro gran empujn con el
Programa Escuela 2.0., aunque las noticias no son nada alentadoras con la supresin del
programa.
Con esta nueva cobertura, se han desarrollado la implementacin de polticas
especficas con dotacin de recursos TIC y se ha centrado y dado mucha importancia a la
978-84-695-8363-0
1304
formacin del profesorado. El Plan Canario de Formacin del Profesorado para el bienio que
comprende los cursos 2010-2012 se desarroll a travs de las siguientes lneas estratgicas de
formacin:
- La formacin en el uso de las TIC clIC escuela 2.0, que tiene por propsito
impulsar la implantacin educativa de las tecnologas de la informacin y de la
comunicacin en las aulas canarias.
- El programa formativo: hablar otra lengua y mejora de la convivencia.
Las lneas estratgicas y sus objetivos se llevaron a cabo a travs de acciones formativas
que se agruparon para una mayor operatividad en las siguientes lneas de formacin:
-Competencias bsicas en las mejores condiciones: calidad en la educacin. Competencias bsicas para todos y todas: equidad en la educacin. Competencia social
y ciudadana: valores para una sociedad del siglo XXI. Competencias bsicas entre todos
y todas: corresponsabilidad en la educacin- (escuela, profesorado, alumnado y familia),
Competencia en comunicacin lingstica: hablar otra lengua y Otras acciones
formativas
-Competencia digital: clIC escuela 2.0 y formacin en el uso de las TIC
La modalidad de formacin en este tiempo ha sido variada y ha oscilado en orden de
preferencia del profesorado entre las modalidades de formacin en el centro educativo, la
teleformacin, la modalidad mixta, la presencial, encuentro e intercambio de experiencias, y
por ltimo los seminarios de autoformacin.
Con respecto a la lnea estratgica de La formacin en el uso de las TIC clIC escuela
2.0 y la competencia digital, las acciones formativas se dirigirn a:
Formar al profesorado para mejorar su competencia en la utilizacin de las TIC.
Potenciar el uso de las TIC como instrumento para la adquisicin de competencias bsicas
integrndolas como herramienta en el trabajo curricular. Elaborar materiales didcticos
aplicables en los centros. Informar y formar a la comunidad educativa en el uso seguro de
Internet. Formar a los coordinadores y coordinadoras TIC de los centros contribuyendo as a
potenciar el desarrollo de sus funciones. Complementar la formacin especfica del
profesorado en el proyecto clic escuela 2.0 a travs de la propuesta de un itinerario formativo
adaptado a sus demandas. Favorecer el intercambio de experiencias y la creacin de redes
entre los centros que participen en el proyecto CILC escuela 2.0.
Proyecto TICSE
Este proyecto se plantea como finalidad conocer las opiniones, valoraciones y
demanda que tiene el profesorado sobre Programa Escuela 2.0, y otros programas similares
de las diversas comunidades autonmas de Espaa. Para ello, se dise un estudio especfico
de opinin desarrollado durante el primer ao de ejecucin del proyecto (curso 2010-11). Los
datos se recogieron mediante un cuestionario on line dirigido al profesorado del ltimo ciclo
de Educacin Primaria y el primero de Educacin Secundaria de las comunidades autnomas
de Espaa.
978-84-695-8363-0
1305
Analizar la lnea estratgica La formacin en el uso de las TIC clIC escuela 2.0 y la
competencia digital del Plan Canario de Formacin del Profesorado.
Analizar las dimensiones TIC y profesorado y Valoracin del Programa Escuela 2.0,
incluidas en el proyecto TICSE 2.0., que se especificaran as:
-
Instrumento
a) Recogida de informacin:
Para realizar el anlisis de la oferta formativa desde el mbito de la Consejera de
Educacin del Gobierno de Canarias se han consultado los documentos y memorias del Plan
Canario de Formacin. Curso 2010-2011, el Plan Canario de Formacin del Profesorado No
Universitario. Bienio 2011-2013, as como el documento Estrategia Canaria para el uso de
las tecnologas en las escuelas. clic escuela 2.048.
Para conocer la opinin del profesorado se dise un cuestionario on line integrado
por 32 preguntas, generalmente de eleccin mltiple, que fue alojado en el servidor del
Instituto de tecnologa travs de las Consejeras de Educacin de las Comunidades
48
978-84-695-8363-0
1306
Indicadores
Datos de identificacin: Caractersticas
personales y acadmicas
Disponibilidad y uso que hace el profesor de
los servicios de internet
Formacin en el uso de las TIC
Items
1,2,3,4,5,6,7,8,9
23; 24
25, 26
49
Visiones y prcticas del profesorado ante el programa Escuela 2.0. Un anlisis comparativo entre comunidades
autnomas.
Cuestionario
dirigido
al
profesorado.
Puede
consultarse
en
https://ddv.ull.es/users/manarea/public/cuesescuela20.pdf
978-84-695-8363-0
1307
Favorecer una formacin pedaggica y didctica del profesorado en el uso de las TIC,
que posibilite prcticas innovadoras, teniendo en cuenta las etapas educativas y las
reas o materias.
En cuanto a la Estrategia Canaria para el uso de las tecnologas en las escuelas. Clic
escuela 2.0 se entiende que es fundamental que el profesorado posea conocimientos y
destrezas necesarios, no slo en los aspectos tecnolgicos sino, sobre todo, en los
pedaggicos, metodolgicos y sociales de la integracin de estos recursos en su prctica
docente cotidiana. Por eso se pretende capacitar al profesorado para: Gestionar y procesar de
forma crtica recursos en red. Utilizar herramientas de comunicacin y de gestin de la
informacin. Integrar las TIC en su prctica diaria, haciendo un uso efectivo de los recursos y
de las nuevas posibilidades metodolgicas de aula. Promover la adquisicin de la
competencia digital en el alumnado. Participar activamente en redes de aprendizaje sociales,
no slo vinculadas al centro, sino de colaboracin e intercambio de experiencias, informacin
y conocimiento con otros profesores y profesoras. Ser capaz de coordinarse y realizar trabajos
colaborativos con el resto del equipo educativo de su centro, intercentros, de redes de
aprendizaje, etc.
En lo que se refiere a los contenidos de la formacin, la estrategia clic-escuela2.0 se
plantea un mdulo 0 de formacin inicial, de 10 h., un mdulo 1, de 20 h. de carcter
presencial para promover la integracin de las TIC en el proceso de enseanza-aprendizaje y
978-84-695-8363-0
1308
978-84-695-8363-0
1309
Como se puede observar en los datos, la oferta formativa para el uso de las TIC en la
prctica docente de la Direccin General de Ordenacin e Innovacin Educativa abarca un
amplio espectro de actividades. Estas actividades de formacin del profesorado se dirigen
fundamentalmente a facilitar y dinamizar el uso de estas tecnologas en los procesos
educativos de aula y centro escolar. Se incide tanto en el desarrollo de la competencia
tecnolgica como didctica y social de estas tecnologas. Los contenidos se orientan a la
formacin del profesorado a nivel de usuario (alfabetizacin tecnolgica) as como a su
formacin para el uso didctico de estas tecnologas. En la formacin para la integracin de
las TIC se contempla su uso como recurso didctico en las distintas reas curriculares
(actividades con TIC, elaboracin de materiales) y su integracin como contenido
relacionando con la competencia de Tratamiento de la Informacin y Competencia Digital
(TICD) y su relacin con el resto de las competencias bsicas.
B)
TIC y profesorado: La valoracin del profesorado sobre la oferta formativa procedente
de las instituciones pblicas y sus necesidades de formacin.
En la encuesta participaron un total de 200 profesores, de los cuales el 42% son varones
y 55% mujeres con edades comprendidas entre los 45 y 54 aos (48,5%). El desarrollo
profesional se caracteriza porque el 39,5% cuenta una experiencia de 21 aos o ms, y el
31,5% con 11 y 20 aos de docencia, mayoritariamente en la etapa de Primaria (99%) y en
centros pblicos (99,5%).
El factor ms relevante en el proceso de integracin de las TIC en la docencia es sin
duda la formacin del profesorado, que es quien en definitiva va a adaptar estas tecnologas a
la prctica de la enseanza. Interesa, por tanto, conocer el nivel de alfabetizacin digital con
la que cuenta los docentes, as como su formacin didctica para usarlas en el proceso de
enseanza y aprendizaje.
En este sentido, vamos a abordar primero qu dominio personal tienen los docentes de
las TIC en los contextos no formales, qu recursos o herramientas suele utilizar, con qu
frecuencia en definitiva, cul es su perfil de usuario de las tecnologas digitales.
Posteriormente conoceremos su opinin sobre la formacin del profesorado sobre TIC, con
qu nivel de formacin cuenta y cules son sus demandas. En ambos casos se le ha presentado
al profesorado un tem de escala (1-5), para valorar la frecuencia de uso de internet se le han
ofertado las siguientes opciones: navegacin por la WWW; correo electrnico; foros y chats;
blogs; redes sociales (Twitter, Facebook,); aulas virtuales (Moodle, WebCT, ); webs de
videos, fotos, sonidos (Youtube, Flirck, Spotify, ); descarga de msica, pelculas, software,
; compras on line (viajes, objetos, ); lectura de prensa y/o revistas por Internet; gestiones
bancarias y/o administrativas on line; visitar portales educativos de Internet (ITE, Agrega,
Profesnet, Educared,); otros.
Y para conocer su opinin sobre la formacin del profesorado sobre TIC, las opciones
presentadas fueron las siguientes: considero que tengo la formacin adecuada para utilizar las
TIC en mi docencia; creo que mis compaeros del centro estn formados para desarrollar el
programa Escuela 2.0 o en el Programa similar TIC; la Administracin est ofertando la
formacin adecuada al profesorado participante en la Escuela 2.0 o en el Programa similar
TIC; estoy satisfecho/a de los cursos de formacin sobre TIC a los que he asistido.
978-84-695-8363-0
1310
Correo @
Foros, Chat
Blog
4,21
2,06
2,56
Web multimedia
Compras on line
2,96
2,21
Redes Sociales
2,07
Gestiones bancarias
2,97
Estos datos nos muestran que el profesorado canario (de acuerdo con sus propias
manifestaciones) es un usuario de las tecnologas digitales y que suele utilizarlas
fundamentalmente para buscar informacin y para comunicarse a travs del correo
electrnico, haciendo un menor uso de los foros y de los chat. Sin embargo no suele ser un
usuario de los recursos de la web 2.0 como son los blog o las redes sociales.
Cmo valoran la formacin del profesorado en TIC? Cules son sus demandas de
formacin?
Tengo formacin uso
TIC
3,17
Mis
compaeros
disponen de formacin
necesaria
2,4
Oferta institucional es
adecuada
Satisfaccin
actividades formacin
2,76
3,06
Planificar
Proy/expe
colaborativas
entre centros
63,5
Conocer/usar
los recursos
2.0
Conocer/usar
software
No
necesito
formacin
64,5
47
67,5
978-84-695-8363-0
1311
Conclusiones
La formacin del profesorado es una de las variables ms determinantes para la
integracin de las TIC en su prctica educativa. El dominio y uso que tiene el profesorado de
las tecnologas digitales en los contextos no formales son un indicador de su competencia o
alfabetizacin digital. En este sentido, la situacin que reflejan los propios docentes es que la
mayora dice ser usuario habitual del correo electrnico y la navegacin web, la lectura de la
prensa, la visita a web multimedia y el uso de internet para gestiones bancarias. Los servicios
de internet que menos utilizan los docentes son los foros, chats, blogs, redes sociales y los
portales educativos. Aun as este nivel de uso que tiene el profesorado de Internet permite
pensar que a corto y medio plazo el profesorado podr profundizar en el uso pedaggico de
las TIC.
Es indudable que esta formacin se complementa a su vez con la oferta formativa que
recibe el profesorado en los contextos educativos. En este sentido, el profesorado de Canarias
considera que la oferta formativa de sus respectivas administraciones educativas es la
correcta, y se muestran satisfechos con las actividades de formacin recibidas. Aun as el
profesorado en general considera que necesita ms formacin. La situacin de la formacin
del profesorado para la integracin de las TIC refleja que, con el Programa Escuela 2.0, el
profesorado sita sus necesidades en el reto que supone la introduccin progresiva de estas
tecnologas en los centros y en las aulas, al demandar en el docente nuevas competencias
relacionadas con la creacin y desarrollo de materiales y actividades digitales, con el uso de
las tecnologas para optimizar las labores evaluadoras, la planificacin de proyectos y
experiencias colaborativas entre centros, as como con el uso de los recursos de la web 2.0.
Todo parece evidenciar que la situacin de la formacin del profesorado sobre TIC no
es muy distinta de la que la que se tena en Programas Institucionales anteriores segn se
desprende de los estudios realizados, salvo en la exponencial evolucin que est marcando la
tecnologa digital que provoca un incremento de la oferta y de la demanda de formacin de
los recursos de la web 2.0. De este modo, lo que ms destaca y reconoce la mayora del
profesorado es que el Programa Escuela 2.0 ha provocado la llegada efectiva y masiva de
tecnologas a las aulas; en concreto, de ordenadores personales tanto para los docentes como
para el alumnado, as como que se ha dotado a las aulas de Pizarras Digitales Interactivas
(PDI) y de acceso a Internet. Este hecho, que, desde un punto de vista educativo, no es tan
relevante, s es destacable en procesos de implementacin de polticas TIC, ya que la dotacin
y disponibilidad de TIC en aulas y colegios es una condicin necesaria e indispensable
aunque insuficiente por s misma para poder desarrollar acciones educativas con las
tecnologas.
Referencias
Area, M. (2010). El proceso de integracin y uso de las TIC en los centros escolares. Un
estudio de casos. Revista de Educacin, 352, 77-98
Area, M. (2011). Los efectos del modelo 1:1 en el cambio educativo en las escuelas.
Evidencias y desafos para las polticas iberoamericanas. Revista Iberoamericana de
Educacin, 56, 49-74.
Cano, C. y otros (2010). De las propuestas de la Administracin a las prcticas de aula
Revista de Educacin, 352, 53-76.
978-84-695-8363-0
1312
978-84-695-8363-0
1313
Resumen
El estudio tiene como objetivo disear, implementar y evaluar un entorno virtual de
aprendizaje en el curso de didctica general. Se opta por un diseo de estudio de caso con la
participacin de 32 estudiantes de una universidad chilena, de la titulacin de maestro de
primaria. Los resultados demuestran que los participantes valoran positivamente la
experiencia, desarrollan habilidades en el uso de la tecnologa, analizan el potencial del
contenido pedaggico a la luz de sus experiencias escolares, asumen progresivamente el rol
de profesor y crean nuevas formas de aprender.
Descriptores: entorno virtual, identidad profesional, enseanza, aprendizaje.
Abstract
The study aims to design, implement and evaluate a virtual learning environment in the
course of general teaching. We have opted for a case study design with the participation of 32
students of elementary teacher`s degree from a Chilean university. The results demonstrate
that participants value positively the experience, develop skills in the use of technology,
analyze the potential of pedagogical content by the light of their school experiences,
gradually assume the role of teacher and create new ways of learning.
Keywords: virtual environment, professional identity, teaching, learning.
Introduccin
Las Tecnologas de la Informacin y Comunicacin (en adelante TIC) se han
convertido en un eje transversal de toda accin formativa (Marqus, 2000). En la educacin
superior, se han introducido los Entornos Virtuales de Aprendizaje (EVA) con bastante xito
a travs del diseo de cursos libres de las restricciones que imponen el tiempo y el espacio en
la enseanza presencial facilitando una continua comunicacin (virtual) entre estudiantes y
profesores. Comprendemos un EVA como un espacio mediado por la tecnologa que modifica
la relacin educativa. Son elementos centrales la comunicacin, el procesamiento, la gestin y
la distribucin de la informacin, agregando a la relacin educativa, nuevas posibilidades y
limitaciones para el aprendizaje.
Bajo este modelo los estudiantes o grupos aprenden orientados por los docentes (hay
un fuerte componente comunicativo), realizan diversos procesos cognitivos con la
informacin que reciben o deben buscar y los conocimientos previamente adquiridos. Segn
Echeverra (2001) se tratara de pasar de una enseanza centrada en asignaturas poco flexibles
978-84-695-8363-0
1314
978-84-695-8363-0
1315
978-84-695-8363-0
1316
Creo que aqu el profesor debera haber preguntado antes al alumno cules eran
sus conocimientos previos sobre el tema, para saber cul era el punto de partida.
Yo lo hubiera hecho de esa manera. (E1-A10)
Respecto de las relaciones pedaggicas, el EVA aumenta progresivamente la
participacin de los alumnos lo que se grafica por ejemplo en la cantidad de intervenciones en
el foro y en la calidad de los argumentos expuestos en l. Las actividades formativas
propuestas a los estudiantes exigan trabajo colaborativo lo que llev a marcar liderazgos de
algunos de ellos.
El foro nos ha ayudado a esclarecer cuestiones individuales como problemas que
muchos no comprendamos, por esto, tuvimos que pensar en estrategias de
resolucin colectivas. (E1-A29)
Conclusiones
El entorno virtual de aprendizaje result una herramienta motivadora para los
estudiantes quienes tuvieron que asumir posiciones de profesor y tomar decisiones
profesionales sin la responsabilidad de serlo. Esta estrategia resulto un buen ejercicio para
generar la discusin en los foros.
Durante el curso pudimos constatar que la diversidad de conocimientos y experiencias
del grupo contribuye positivamente al proceso de aprendizaje, al tiempo que reduce la
ansiedad que provocan las situaciones individuales de resolucin de problemas.
Se identificaron como variables determinantes de la identidad profesional docente los
mtodos de enseanza y aprendizaje desarrollados en los procesos de escolarizacin previos.
Consideramos que el presente trabajo de carcter exploratorio, aporta informacin
relevante para comprender mejor la construccin de la identidad del profesor en formacin.
Referencias
Bisquerra, R. (Coord.). (2004). Metodologa de la investigacin educativa. Madrid: La
Muralla.
Daz Barriga, F. y Hernndez, G. (2002). Estrategias Docentes para un Aprendizaje
Significativo. Una Interpretacin Constructivista. 2. Edicin. Mxico: McGraw-Hill
Interamericana.
Echeverra, J. (2001). Educacin y nuevas tecnologas: el plan europeo e-learning. En Revista
de Educacin, n extraordinario "Globalizacin y educacin" (pp. 201-210). Madrid.
Friz, M., Sanhueza, S. y Figueroa, E. (2011). Concepciones de los estudiantes para profesor
de Matemticas sobre las competencias profesionales implicadas en la enseanza de la
Estadstica. Revista electrnica de investigacin educativa, 13(2), 113-131.
Grootenboer, P. (2006). Mathematics educators: Identity, beliefs, roles and ethical dilemmas.
En P. Grootenboer, R. Zvenbergen, y M. Chinnappan (Eds.), Identities, Cultures and
Learning Spaces (pp. 270-277). Sydney: Merga
978-84-695-8363-0
1317
978-84-695-8363-0
1318
Resumen
Las universidades en la actualidad deben preparar para la integracin en el mercado
laboral, adecuar entre perfiles formativos y profesionales adems de desarrollar dimensiones
de la personalidad del estudiante potencindole como persona capaz de aprender a aprender
a lo largo de la vida en una sociedad global y plural. Nuestro objetivo es estudiar el grado de
dominio, desarrollo y relevancia de las competencias referidas a la atencin a la diversidad
lingstica, discapacidad, clase social e ideologa poltica definidas en el Grado de
Educacin Primaria impartido en la Facultad de Ciencias de la Educacin de la Universidad
de A Corua. La muestra estar formada por el alumnado de ltimo curso, futuro egresado.
Se han identificado, analizado y evaluado aquellas competencias generales, transversales y
especficas relacionadas con la atencin a la diversidad, dada la importancia de la formacin
inicial de los futuros docentes para afrontar una escuela heterognea.
Descriptores: Competencias, Atencin a la diversidad, Espacio Europeo de Educacin
Superior, Formacin inicial profesorado.
Abstract
Nowadays universities must prepare for integration into the labor market, adapt between
training and professional profiles as well as develop personality dimensions of the student,
promoting them as a person to be able to learn to learn throughout life in a global and
pluralistic society. Our goal is study the domination, development and relevance degree of
competencies concerning attention to linguistic diversity, disability, social class and political
ideology defined in Primary Education Degree taught in the Faculty of Sciences of Education
in the University of A Corua. The sample will consist of final-year student, future graduates.
Have been identified, analyzed and evaluated those general, transversal and specific skills
related to diversity, given the importance of the initial training of future teachers to deal with
a heterogeneous school.
Keywords: Skills, Attention to diversity, European Higher Education Area, Initial teacher
training.
978-84-695-8363-0
1319
Introduccin
Nos encontramos en un momento de profunda transformacin, en mltiples niveles,
econmico, poltico, tecnolgico, social y cultural que repercuten directamente en la
educacin, ya que desde los aos 90 nos hemos sumergido en un proceso de convergencia
hacia el Espacio Europeo de Educacin Superior (EEES) iniciado con la Declaracin de
Bolonia en 1999. Gonzlez Maura y Gonzlez Tirados (2008) recoge que esta convergencia
est encaminada a lograr competitividad, empleabilidad y movilidad [] que centra la
atencin en las competencias profesionales (p.192).
El vocablo competencia ha sido definido a lo largo de los aos desde diferentes puntos
de vista por numerosos autores debido a la polisemia del trmino. Entendemos las
competencias como caractersticas relacionadas con la ejecucin exitosa de una actividad que
implica slidos conocimientos que fundamentan la accin, integrando no slo conocimientos
sino tambin procedimientos, actitudes y normas, con carcter global y generalizables a ms
de una actividad (Alonso-Martn, 2010; Rodicio e Iglesias, 2011). El Proyect Tuning (2003)
las subdivide en genricas/nucleares, especficas y transversales. Las primeras sern aquellas
que identifican elementos compartidos que pueden ser comunes a cualquier titulacin, las
segundas las relacionadas con cada rea temtica y las terceras sern las que se trabajarn de
forma horizontal en todas las materias (Rodrguez Esteban, 2007).
La escuela espaola del siglo XXI es claro reflejo de una sociedad multitnica,
multirracial, plurilingstica, por lo que tendr que educar a cada uno de los educandos
independientemente de sus circunstancias. Gimeno Sacristn (2000) alude a la naturalidad de
convergencia en la escuela de individualidades derivadas de ser un espacio en el que
concurren diversidad de sujetos y grupos sociales. La Reforma Educativa impulsada por la
Ley de Ordenacin General del Sistema Educativo 1/1990, de 3 de octubre, recoga este
aspecto ya que delimitaba entre sus objetivos principales atender a la diversidad favoreciendo
una atencin ms individualizada permitiendo ajustar la educacin a las necesidades del
alumnado. Esta reforma se encontr con un problema, que persiste en la actualidad, que es la
falta de formacin inicial y continua de los maestros para dar respuesta a la diversidad.
El inters de esta investigacin reside en evaluar en qu situacin nos encontramos en
la actualidad tras la aprobacin del Real Decreto 1393/2007 de 29 de octubre, por el que se
regulan las enseanzas universitarias (modificado por el Real Decreto 861/2010 de 2 de
julio), ambos fruto de la reforma curricular universitaria en la que nos encontramos inmersos,
como convergencia con el EEES. Es por ello que los nuevos planes de estudios implantados
en las universidades espaolas debern recoger competencias generales relacionadas con la
atencin a la diversidad, y en mayor medida, en el currculum de los Grados de Educacin
(Infantil, Primaria y Social) deber existir una gran carga de competencias especficas y
transversales relacionadas con la atencin a la diversidad. Siguiendo esta lnea, Gonzlez
Alonso (2005) seala que es necesario favorecer una formacin inicial hacia la diversidad,
nuevos valores, resolucin de conflictos, suprimiendo los prejuicios y estereotipos de los
docentes, y ms si cabe en los discentes de las titulaciones relacionadas con Educacin. Por
tanto, sin obviar que la escuela cumple una funcin social con la que se perseguir una norma
en la formacin por competencias que acorte las distancias existentes entre el sistema
educativo y el mundo laboral, es imprescindible no perder de vista los intereses, capacidades
y conocimientos previos, de cada persona buscando su desarrollo integral (Salmern Prez,
2009).
978-84-695-8363-0
1320
Cabe decir que entendemos atencin a la diversidad como un concepto amplio que
incluye tanto las diferencias en estilos de aprendizaje, en capacidades para aprender, en
niveles de desarrollo y aprendizajes previos, diversidad lingstica, clase social e ideologa
poltica. De ah que suscribamos las palabras de Rodrguez Izquierdo (2009) ante la
necesidad de convertir la escuela en un espacio generador del dilogo entre grupos sociales y
culturales diversos, que favorezca una autntica igualdad de oportunidades y que d respuesta
a las necesidades educativas de todos y cada uno de sus miembros (p. 3). Con todo ello,
queda evidenciada la necesidad de formar a los futuros educadores para trabajar en una
realidad caracterizada por la diversidad. De lo que deriva la necesidad de evaluar en qu
medida las competencias referidas a la atencin a la diversidad en los planes de estudios de
los futuros docentes en general y en este particular las definidas en el plan de estudios del
Grado de Educacin Primaria de la Universidad de A Corua, que se imparte en la Facultad
de Ciencias de la Educacin, se han desarrollado, qu grado de dominio poseen los futuros
egresados y la importancia que les conceden.
Mtodo
Durante el curso 2012-2013 se ha procedido a elaborar un cuestionario que recoja las
competencias tanto nucleares, especficas y transversales de la titulacin de Grado de
Educacin Primaria de la Facultad de Ciencias de la Educacin de la Universidad de A
Corua, con el fin de conocer cul es el grado de desarrollo (si se ha incidido en ellas a lo
largo de la titulacin), dominio (adquisicin que ha hecho de las mismas) y relevancia
(importancia que les conceden para un futuro profesional) de cada una de ellas. Las
competencias se han valorado en base a una escala Likert de 5 respuestas, siendo 1 nada y 5
mucho. El cuestionario se ha aplicado a los alumnado de ltimo curso, futuro egresado de
antedicha titulacin. Una vez cubiertos, para el fin que nos ocupa en esta comunicacin, se ha
procedido a seleccionar de las 96 competencias definidas en la titulacin, aquellas referidas a
la atencin a la diversidad lingstica, discapacidad, clase social e ideologa poltica. Tras la
reduccin de tems, estos quedan distribuidos, como se muestra en las Tablas 1, 2 y 3, de la
siguiente manera:
-
Muestra
La muestra est formada por 55 sujetos pertenecientes a la titulacin de Grado de
Educacin Primaria de la Facultad de Ciencias de la Educacin de A Corua. De los cuales, el
94.55% son mujeres y el 5.45% son hombres, como se muestra en la Figura 1.
978-84-695-8363-0
1321
Resultados
Anlisis descriptivo
A continuacin se ha procedido realizar a un anlisis descriptivo de cada uno de los
tems que atienden a la diversidad en base a las dimensiones de desarrollo, dominio y
relevancia.
Dimensin Desarrollo
Los datos de nmero de sujetos encuestados sobre el grado de desarrollo de las
competencias que atienden a la diversidad en la titulacin de Grado en Educacin Primaria
oscilan entre 54 y 55. Decir que el alumnado considera haber desarrollado las competencias
con valores entre 2.7 y 3.47 en casi la totalidad de los tems definidos. Cabe sealar que en
aquellos referidos a los idiomas Conocer las dificultades para el aprendizaje de las lenguas
978-84-695-8363-0
1322
Media
D.T.
55
3,42
1,315
55
2,35
1,075
55
2,82
1,188
Media
D.T.
55
3,29
,956
55
2,69
,960
55
2,80
1,129
55
2,60
1,116
55
3,07
1,136
55
3,04
1,105
55
2,85
1,079
54
3,07
1,211
54
2,44
1,313
55
2,44
1,330
55
3,55
1,288
55
1,91
1,093
55
54
1,80
2,41
1,007
1,206
55
2,58
1,117
55
3,47
,997
N Media
55
3,20
55
3,11
55
2,35
D.T.
1,129
1,315
1,158
54
3,15
1,156
54
2,78
1,176
Dimensin Dominio
En cuanto a la dimensin relacionada con el dominio de las competencias definidas en
el ttulo referidas a atencin a la diversidad decir que en aquellas que se ha obtenido una
puntuacin inferior son consistentes con las reflejadas en el punto anterior, siendo Conocer
978-84-695-8363-0
1323
las dificultades para el aprendizaje de las lenguas oficiales de estudiantes de otras lenguas y
Afrontar situaciones de aprendizaje de lenguas en contextos multilinges valores de 2.33 y
2.20 respectivamente. Datos que muestran que los sujetos no consideran haber alcanzado un
grado de dominio de esas competencias.
Tabla 2
Dimensin dominio de las competencias de atencin a la diversidad
Estadsticos descriptivos
COMPETENCIAS DE LA TITULACIN NUCLEARES
Expresarse correctamente, tanto de forma oral como escrita, en las lenguas oficiales de la
comunidad autnoma.
Dominar la expresin y la comprensin de forma oral y escrita de un idioma extranjero.
Desarrollarse para el ejercicio de una ciudadana abierta [...] capaz de analizar la realidad,
diagnosticar problemas, formular e implantar soluciones basadas en el conocimiento y
orientadas al bien comn.
COMPETENCIAS DE LA TITULACIN ESPECFICAS
Conocer las caractersticas de estos estudiantes, as como las caractersticas de sus contextos
motivacionales y sociales.
Dominar los conocimientos necesarios para comprender el desarrollo de la personalidad de
estos estudiantes e identificar disfunciones.
Identificar dificultades de aprendizaje, informarlas y colaborar en su tratamiento.
Identificar y planificar la resolucin de situaciones educativas que afectan a estudiantes con
diferentes capacidades y distintos ritmos de aprendizaje.
Promover acciones de educacin en valores orientadas a la preparacin de una ciudadana
activa y democrtica.
Conocer y abordar situaciones escolares en contextos multiculturales.
Analizar e incorporar de forma crtica las cuestiones ms relevantes de la sociedad actual
que afectan a la educacin familiar y escolar [...].
Fomentar la educacin democrtica de la ciudadana y la prctica del pensamiento social
crtico.
Valorar la relevancia de las instituciones pblicas y privadas para la convivencia pacfica
entre los pueblos.
Conocer el hecho religioso a lo largo de la historia y su relacin con la cultura.
Hablar, leer y escribir correcta y adecuadamente en las lenguas oficiales de la Comunidad
Autnoma.
Conocer las dificultades para el aprendizaje de las lenguas oficiales de estudiantes de otras
lenguas.
Afrontar situaciones de aprendizaje de lenguas en contextos multilinges.
Expresarse, oralmente y por escrito en una lengua extranjera.
Comprender los principios que contribuyen a la formacin cultural, personal y social desde
las artes.
Comprender los principios que contribuyen a la formacin cultural, personal y social desde
la educacin fsica.
COMPETENCIAS DE LA TITULACIN TRANSVERSALES
Aplicar un pensamiento crtico, lgico y creativo.
Comportarse con tica y responsabilidad social como ciudadano y como profesional.
Capacidad de expresin oral y escrita en varias lenguas (al menos en una lengua extranjera).
Capacidad crtica y creativa en el anlisis, planificacin y realizacin de tareas, como fruto
de un pensamiento flexible y divergente.
Capacidad de adaptarse a nuevas situaciones en una sociedad cambiante y plural.
Media
D.T.
55
4,07
,836
55
3,00
1,186
55
3,64
,868
Media
D.T.
55
3,27
,891
55
2,69
,879
55
2,82
1,124
55
2,76
1,071
55
3,27
1,079
55
3,16
1,067
55
2,96
1,154
54
3,37
1,138
54
2,74
1,231
55
2,60
1,328
55
4,02
1,130
55
2,33
1,171
54
54
2,20
2,80
1,071
1,172
55
2,75
1,092
55
3,35
,985
N Media
54
3,59
55
4,09
54
2,96
D.T.
,981
,908
1,132
54
3,70
,816
54
3,74
,935
Dimensin Relevancia
En cuanto al grado de relevancia de las competencias de atencin a la diversidad, decir
que los estudiantes las consideran importantes, obteniendo puntuaciones superiores a 3.69 en
la totalidad de los tems. Destacar que la competencia Identificar dificultades de aprendizaje,
978-84-695-8363-0
1324
Media
D.T.
55
4,73
,622
55
4,62
,707
55
4,60
,760
Media
D.T.
55
4,84
,501
55
4,76
,637
55
4,91
,398
55
4,80
,704
55
4,51
,717
55
4,51
,690
55
4,53
,690
54
4,50
,863
54
3,69
1,061
55
3,16
1,316
55
4,73
,679
55
4,45
,959
55
54
4,29
4,54
1,048
,884
55
3,84
,977
55
4,20
,848
N Media
54
4,69
55
4,71
55
4,58
D.T.
,668
,658
,917
54
4,50
,666
54
4,67
,673
978-84-695-8363-0
1325
Tabla 4
Fiabilidad del instrumento por dimensiones
N de elementos
24
Discusin
El objetivo principal de este trabajo ha sido analizar en qu medida las competencias
relacionadas con la atencin a la diversidad lingstica, discapacidad, clase social e ideologa
poltica, definidas en el plan de estudios de Educacin Primaria de la Universidad de A
Corua han sido desarrolladas, los estudiantes consideran si las dominan y en qu medida
valoran su relevancia. A la vista de los datos obtenidos cabe decir que la casi totalidad de las
competencias relacionadas con atencin a la diversidad son consideradas como desarrollas en
el plan de estudios, opinan que las han adquirido y de suma relevancia para el futuro
profesional, slo en dos de ellas Conocer las dificultades para el aprendizaje de las lenguas
oficiales de estudiantes de otras lenguas y Afrontar situaciones de aprendizaje de lenguas
en contextos multilinges las puntuaciones son visiblemente inferiores al resto. En cuanto a
las propiedades psicomtricas del cuestionario analizado comentar que cada una de las
dimensiones analizadas obtiene una alta fiabilidad (Alfa de Cronbach superior a .9), lo que
muestra su consistencia interna.
Referencias
Alonso-Martn, P. (2010). La valoracin de la importancia de las competencias transversales:
Comparacin de su percepcin al inicio y final del curso en alumnos de psicologa.
Revista de Investigacin Educativa, 28(1), 119-140.
Gimeno Sacristn, J. (2000). La construcin del discurso acerca de la diversidad y sus
prcticas En A. Parcerisa Arn (Dir.), Atencin a la diversidad: claves para la
innovacin educativa (pp. 11-34). Espaa: Editorial Laboratorio Educativo y Gra.
Gonzlez Alonso, F. (2005). Competencias desde la perspectiva intercultural para el grado
de
educacin
infantil.
Disponible
en:
http://www.aufop.com/aufop/revistas/indice/digital/114
Gonzlez Maura, V. y Gonzlez Tirados, R. M. (2008). Competencias genricas y formacin
profesional: un anlisis desde la docencia universitaria. Revista Iberoamericana de
Educacin, 47, 185-209.
Proyect Tuning (2003). Tuning Educational Structures in Europe. Informe final. Proyecto
piloto. Fase 1. Bilbao: Universidad de Deusto.
Rodicio Garca, M. L. e Iglesias Cortizas, M. J. (2011) La formacin en competencias a travs
del prcticum: un estudio piloto. Revista de Educacin, 354, 99-124.
Rodrguez Esteban, A. (2007). Las competencias en el espacio europeo de educacin superior.
Humanismo y Trabajo Social, 6, 139-153.
978-84-695-8363-0
1326
978-84-695-8363-0
1327
Resumen
La funcin profesional del orientador, conforme daba respuesta a las transformaciones
producidas, requiere, actualmente, en su perfil, la confluencia de aquellas competencias que
capaciten para la implementacin de las funciones orientadoras, por lo que su formacin y
desarrollo constituyen aspectos esenciales en su ejercicio profesional y en la mejora de la
prctica orientadora. Partiendo de la necesidad planteada y de la reforma de la Educacin
Superior producida en los ltimos tiempos, destaca el Proyecto Europeo Development and
Implementation of Common Bachelors Degree Programme in the European Context
(DICBDPEC), cuyo objetivo consiste en desarrollar un marco y diseo curricular de
formacin de grado comn para diversos pases europeos, destinado a los profesionales de la
orientacin. Complementariamente, se pretende la evaluacin de programas e itinerarios
formativos existentes, el intercambio de experiencias, la formulacin de fichas curriculares y
la elaboracin de un glosario, cuestiones abordadas a travs de una metodologa de
investigacin mixta.
Descriptores: Tcnicos en orientacin, Perfil profesional, Competencias, Formacin
curricular.
Abstract
The professional function of the guidance practitioner, as well as it responses to the
transformations produced, requires, currently, in its profile, the confluence of those
competences that would enable to the implementation of the different guiding functions, so its
training and development are essential issues in their professional practice and in the
guidance practice improvement. Based on the need raised and the Higher Education reform
produced in last years, the European Project Development and Implementation of Common
Bachelor's Degree Programme in the European Context (DICBDPEC) is highlighted, whose
main purpose is to develop a framework and a curriculum design of common degree training
for several European countries, whose targets are guidance practitioners. Additionally, the
assessment of programmes and existing training paths, the exchange of experiences, the
formulation of curricular chips and the development of a glossary are intended, questions all
of them approached through a mixed research methodology.
Keywords: Guidance technicians; Professional profile; Competences; Curricular training.
978-84-695-8363-0
1328
Introduccin
Con el paso de los aos, el perfil profesional de los tcnicos en Orientacin ha
evolucionado para dar respuesta a las transformaciones acontecidas en los diferentes sectores,
lo que ha generado mutaciones en los requerimientos de profesionalidad exigidos, as como
un perfil profesional, unos roles y funciones diferentes, en ocasiones, solapadas con las de
otros profesionales que ejercen actividades similares o por otros agentes pertenecientes a la
comunidad o contexto en el que los tcnicos en orientacin ponen en prctica su quehacer
profesional. Por otra parte, si se realiza una revisin de la identidad profesional de los
orientadores en los diferentes pases europeos, destaca la existencia de mltiples enfoques, los
cuales oscilan desde una dedicacin exclusiva y especfica a las funciones orientadoras hasta
la consideracin del rol orientador como una funcin complementaria de otra tarea principal
(Sobrado y Nogueira, 2009), lo que supone que la formacin recibida sea diferente con el
propsito de ajustarse a la concepcin que se tenga en lo que a la identidad profesional se
refiere. Por tanto, se precisa una reflexin y una clarificacin adecuada de los roles y
funciones que este colectivo ha de desempear, junto con la actualizacin de su perfil
profesional. Estos aspectos favorecern la expresin concreta de su labor, la consideracin
positiva de su rol, el reconocimiento del papel a desempear, as como el diagnstico y
priorizacin de sus demandas formativas, las cuales servirn como motor de arranque en el
diseo de un modelo formativo a nivel europeo que favorezca, en este colectivo, las
competencias necesarias para la implementacin de su prctica laboral. En consecuencia, se
est en condiciones de afirmar que la formacin de orientadores ha de considerarse un aspecto
clave de la calidad de la funcin orientadora, lo que incidir, de modo relevante, en el
desarrollo de la profesin y en su prctica laboral.
Histricamente, la formacin y el desarrollo profesional se han considerado dos
realidades diferentes, llegando a entenderse, hoy en da, como dos dimensiones vinculadas e
ntimamente relacionadas, en las que confluyen diferentes componentes y elementos
considerados esenciales en la profesionalizacin de la orientacin (Sobrado, 1996). La
formacin del orientador entendida como desarrollo profesional enlaza con el modelo de
orientacin de naturaleza colaborativa que se centra, predominantemente, en aquellas
prcticas colaborativas de carcter institucional, lo que implica reconocer el carcter
especfico profesional del orientador en un espacio laboral en el que pueda ejercerse la
orientacin, al tiempo que ha de admitirse que se trata de un verdadero agente social,
planificador y gestor de los procesos y que puede y debe intervenir en los sistemas complejos
que configuran la estructura social.
Hoy en da, en la Unin Europea, existe un inters creciente por la formacin de estos
profesionales, lo que supone que, desde diferentes organismos e instituciones, se analicen y
estudien diversas propuestas, as como la existencia de una tendencia vinculada con la
generacin, diseo e implementacin de diseos formativos acordes con el rol profesional de
los orientadores. A nivel europeo, encontramos dos antecedentes clave en lo que respecta al
tratamiento de la formacin de los profesionales de la orientacin para la carrera, los cuales
suponen un fundamento relevante en propuestas posteriores. Por una parte, destaca la
investigacin realizada por Watts (1992), en la que, a partir del anlisis exhaustivo de treinta
y seis profesiones diferentes de orientadores, se elabor un perfil de currculum formativo
comn, ofreciendo, a un tiempo, cuestiones relevantes a considerar en su estructura y
contenidos. Por otra parte, destaca el estudio de Repetto, Ballesteros y Malik (2000), centrado
en el proyecto de formacin de orientadores europeos, en el que se precisan los contenidos y
aspectos metodolgicos a considerar en la elaboracin de un currculum formativo europeo
978-84-695-8363-0
1329
978-84-695-8363-0
1330
Titulaciones.
b)
Competencias.
c)
Departamentos.
d)
978-84-695-8363-0
1331
TITULACIONES DE
"ORIENTACIN/ASESORAMIENTO PARA LA
CARRERA"
Grado 13%
Mster 44%
Postgrado 34%
NC 9%
Tomando como referencia las diez reas de especializacin propuestas por la IAEVG
(2003), se pregunt a las universidades si los programas de orientacin se centraban en cada
una de ellas. Los datos aportados muestran que las competencias con presencia en mayor
nmero de programas se relacionan con las reas de Orientacin Personal (89%),
Orientacin Escolar (78%), as como Orientacin Vocacional y Profesional (64%),
mientras que las que estaban presentes en menos planes se centraban en Desarrollo
Comunitario (11%), Orientacin Ocupacional (13%) y Diagnstico (16%).
978-84-695-8363-0
1332
978-84-695-8363-0
1333
Contenidos
Introduccin a la Orientacin de la Carrera y Desarrollo de los Recursos
Humanos
Gestin de la Informacin
Estrategias e Instrumentos de Gestin
Orientacin para la Carrera en el Sistema Educativo
Relaciones Laborales y Marketing del Servicio
Psicologa ocupacional, educativa y asesoramiento de la carrera
Aspectos socio-econmicos de la Orientacin para la Carrera
8
9
tica y profesionalizacin
Gestin de personal
10
11
12
Conocimiento
clasificacin
13
14
15
sobre
profesiones,
competencias
sistemas
de
mbito/Disciplina
Aspectos introductorios
Gestin
Gestin
Educacin
Relaciones laborales
Psicologa
Aspectos
socioeconmicos
tica profesional
Gestin
Aspectos
socioeconmicos
Estadstica
Legislacin
Aspectos
socioeconmicos
Mercado laboral
Formacin
Dimensin europea
TIC
Investigacin
Comunicacin
978-84-695-8363-0
1334
Para la realizacin del diccionario terminolgico (Glosario), cada uno de los socios
participantes seleccion aquellos trminos y conceptos considerados palabras clave dentro de
cada uno de los mdulos, por su vinculacin y relacin con las competencias de los mismos,
abordando, a un tiempo, diferentes aspectos que inciden de forma directa o transversal en el
desarrollo profesional de los orientadores, as como en el ejercicio de su profesin. Cada uno
de los trminos ha sido definido y traducido a diversos idiomas.
Discusin
La formacin de los Orientadores para la Carrera constituye una lnea de investigacin
preferente a nivel europeo. Desde hace aproximadamente dos dcadas, se parte del anlisis de
los mltiples contextos y modalidades formativas con la intencin de ofrecer una propuesta
formativa curricular comn que pueda ser asumida por varios pases. Dicha tarea resulta
compleja, ya que se precisa concebir de manera similar la identidad profesional de los
orientadores (sus competencias y funciones, los servicios en los que trabajan, su dedicacin,
etc.) y fundamentar la propuesta en un modelo nico, basado en competencias. En esta lnea,
el Proyecto Europeo Development and Implementation of Common Bachelors Degree
Programme in the European Context (DICBDPEC), pretende el diseo de un programa
formativo para los orientadores. En l, se recogen las competencias fundamentales que estos
profesionales deben desarrollar, as como los contenidos tericos y prcticos necesarios para
alcanzar la adquisicin de las mismas. El Proyecto no solo pretende avanzar en el diseo
curricular formativo, sino tambin en la posibilidad de analizar el desarrollo real de esa
formacin y la valoracin de la misma a travs de la implementacin de la totalidad o parte de
los mdulos elaborados, lo que favorecera la obtencin de resultados de cara a mejorar la
propuesta formulada.
Referencias
CEDEFOP (2009). Professionalising career guidance: practitioner competences and
qualification
routes
in
Europe.
Disponible
en:
http://www.cedefop.europa.eu/EN/Files/5193_en.pdf
Ertelt, B. (2007). Wissenschaftliche Aus- und Weiterbildung zur Berufsberatung im
internationalen Vergleich. Disponible en: http://www.die-bonn.de/doks/ertelt0701.pdf
IAEVG (2003). International Competencies for Educational and Vocational Guidance
Practitioners. Berna: IAEVG.
Repetto, E., Ballesteros, B. y Malik, B. (2000). Tareas y formacin de los orientadores en la
Unin Europea. Madrid: UNED.
Sobrado, L.M. (1996). Formacin y profesionalizacin de orientadores: modelos y procesos.
Disponible en: http://www.uv.es/RELIEVE/v2n2/RELIEVEv2n23htm
Sobrado, L.M. y Nogueira, M. (2009). Rol y funciones de los servicios de orientacin
europeos. En L. Sobrado y A. Corts (Coord.), Orientacin profesional. Nuevos
escenarios y perspectivas (pp. 305-322). Madrid: Biblioteca Nueva.
Watts, A. (1992). Perfiles profesionales de los consejeros de orientacin en la Comunidad
Europea. Informe de sntesis. Berln: CEDEFOP.
978-84-695-8363-0
1335
978-84-695-8363-0
1336
Resumen
El mundo global y plural en el que vivimos est generando la demanda de perfiles
profesionales docentes capaces de cubrir necesidades relacionadas con la diversidad cultural
y lingstica en la que tanto profesorado como alumnado se encuentran inmersos. Este es el
caso de los docentes AICLE, quienes imparten formacin bilinge en Proyectos Lingsticos
de Innovacin Educativa con el fin de acercar a sus estudiantes a dicha variedad de culturas
y lenguas en la que estn creciendo. Esta comunicacin se enmarca en un estudio que
pretende describir cules son esas competencias profesionales que se consideran esenciales
para definir el rol de un profesor AICLE y, a partir de su anlisis, establecer un sistema de
indicadores de evaluacin de la calidad de su actividad profesional que facilite el diseo de
planes de formacin. Para ello, y por medio de un estudio bibliogrfico de carcter
descriptivo-comparativo de diversos modelos nacionales e internacionales de profesorado
AICLE, se han extrado las dimensiones constitutivas de los mismos y sus competencias
asociadas. Seguidamente, se procedi a realizar un estudio del contenido de tales elementos
(nomenclatura, tamao, carcter, tipologa, redaccin y descripcin) para continuar con un
anlisis de frecuencias de la aparicin y ponderacin de los mismos, construyendo de este
modo un primer modelo de base terica que ser sometido a una posterior validacin y
experimentacin y que es objeto de exposicin en esta comunicacin.
Descriptores: docente AICLE, competencias profesionales, estudio bibliogrfico, validacin.
Abstract
The global and plural world in which we live is generating a demand for professional
teaching profiles capable of meeting needs related to the cultural and linguistic diversity in
which both teachers and pupils are immersed. This is the case of CLIL (Content and
Language Integrated Learning) teachers, who deliver bilingual education within Language
Education Innovation Projects with a view to bringing pupils closer to the cultural and
linguistic variety in which they are growing. This paper stems from a study conducted with a
view to describing the professional competencies considered essential to define the role of a
CLIL teacher. On the basis of this analysis, the study aims to establish a system of indicators
to evaluate the quality of their professional activity which would facilitate the design of
training plans. To do that, using a descriptive-comparative bibliographic study of different
national and international models of CLIL teachers, the dimensions that constitute said
models have been extracted along with their associated competencies. Subsequently, a study
was performed on the content of said elements (nomenclature, size, character, type, wording
and description) in order to analyse the frequency of appearance and weighting, thereby
978-84-695-8363-0
1337
constructing an initial theory-based model that will be subject to subsequent validation and
experimentation, and which is described in this paper.
Keywords: CLIL teacher, professional competencies, bibliographic study, validation.
Introduccin
La educacin ha de moverse en la medida de lo posible al ritmo que marcan los
avances de la sociedad con el objetivo de dar una respuesta a las demandas formativas y evitar
grandes distanciamientos entre los distintos estratos sociales, al igual que entre los diferentes
grupos generacionales de la poblacin. Hemos pasado de ser ciudadanos de un pas a serlo de
un conjunto de ellos (Unin Europea, UE), para posteriormente vernos envueltos en un
mundo globalizado.
Una de las principales limitaciones que encuentran estos avances son las lenguas, es
por ello que sea necesario activar polticas lingsticas que acompaen en esta evolucin
social. As se observa con claridad el ejemplo de la UE cuando plantea en su Tratado de
Funcionamiento (Diario Oficial de la Unin Europea, 2010) objetivos relativos al aprendizaje
y difusin de las lenguas de los Estados miembros.
Son los distintos pases los que, mediante la concrecin en polticas ms
contextualizadas, crean programas que potencian el estudio e investigacin en nuevos
enfoques de enseanza-aprendizaje de lenguas que favorezcan la adquisicin y dominio
competencial de idiomas necesarios para el intercambio y entendimiento cultural, as como
para la mejora competitiva en el desarrollo profesional.
Es de aqu y de la continua investigacin en materia de enseanza de idiomas de
donde surge un enfoque educativo como el de AICLE, que aparte de fomentar la adquisicin
de una lengua extranjera, persigue desarrollar en el alumnado las competencias necesarias
para poder desenvolverse en la lengua objeto y con la mayor naturalidad posible en entornos
acadmicos, profesionales y sociales (Coyle, Hood y Marsh, 2010 y Mehisto, Marsh y Frigols
2012).
El trmino AICLE lleva implcito el concepto del cmo, es decir un aprendizaje
ms basado en lo procedimental que en lo conceptual, se aprende a razonar, describir o
interpretar las matemticas, las ciencias o el arte en una lengua extranjera.
Desde que AICLE apareciese en los programas de innovacin educativa se ha
mantenido a la vanguardia de la enseanza de idiomas durante estos veinte aos. El motivo
fundamental procede de que sus bases, construccin y metodologa beben tanto de fuentes
tericas procedentes de la investigacin en la adquisicin de segundas lenguas, como de
teoras del aprendizaje en general (Coyle, Hood y Marsh, 2010).
Mtodo
Un enfoque AICLE requiere de un profesional AICLE. Actualmente la
administracin pblica establece como requisito nico para acceder a los puestos de
profesorado AICLE el conocimiento del idioma a un nivel B2 (Orden de 15 de octubre de
978-84-695-8363-0
1338
2012) del Marco Comn Europeo de Referencia para las Lenguas (Council of Europe, 2001).
Es el nico elemento diferenciador con respecto al acceso del docente a la funcin de maestro
de Educacin Primaria.
Al igual que existen y estn definidas en trminos de competencias las figuras de los
maestros de Educacin Primaria (Orden ECI/3857/2007), consideramos que este nuevo perfil
del que se demanda un compendio de competencias de varias especialidades mas algunas
caractersticas procedentes del nuevo reto pedaggico, debera contar con su propia
estructuracin y segmentacin en los conocimientos, habilidades y actitudes necesarios para
desempear su labor de la mejor forma posible.
Podemos evaluar los resultados de nuestro alumnado tras la participacin en
programas implementados bajo el paraguas de AICLE, pero cmo evaluamos la calidad del
proceso sin un modelo de referencia al que aplicar una serie de indicadores?
El objetivo aqu pretendido es la elaboracin de un perfil competencial del docente
de Educacin Primaria especializado en enseanza AICLE que sirva de base para el diseo de
un plan formativo as como para el desarrollo de estrategias de evaluacin de la labor docente
de estos profesionales.
El planteamiento metodolgico se centra en la realizacin de un estudio documental
comparativo donde los materiales escritos son la principal evidencia epistemolgica de este
trabajo. Para su puesta en marcha se ha seguido el proceso establecido por De la Torre y
Navarro (1990): eleccin del tema, recopilacin de bibliografa sobre el tema, elaboracin de
fichas bibliogrficas, lectura rpida del material, ampliacin de la informacin sobre el tema,
lectura minuciosa de la bibliografa y elaboracin de fichas de contenido.
Tras una bsqueda detallada en diversas fuentes documentales, ocho han sido los
modelos seleccionados para un estudio ms preciso de la informacin que aportan. Diversidad
geogrfica, relevancia de las aportaciones e importancia a nivel nacional y europeo han sido
los criterios utilizados para optar por ellos. A pesar del peso equilibrado de los tres factores
mencionados en la eleccin del material de estudio, se persegua primordialmente que
abarcase dos contextos fundamentales: en primer lugar Espaa como entorno ms prximo, y
en segundo lugar Europa como referente y base del modelo de poltica educativa en materia
de enseanza de lenguas extranjeras desarrollada en nuestro pas.
Se presentan las fichas de contenido estableciendo los datos bsicos de cada uno de
ellos tales como su nomenclatura, localizacin, dimensiones y competencias (ver tablas 1 y
2). Los citados modelos sern sometidos a un anlisis comparativo a partir del anlisis
descriptivo de las dimensiones que los definen y sus competencias constitutivas.
Tabla 1
Fichas de contenido de los modelos tericos de competencias del maestro AICLE nacionales
Localizacin
Extremadura
Andaluca
Dime nsiones
Objetivos
Competencia y conciencia
lingstica
Enfoque pedaggico
Evaluacin
Contexto
Lengua
Compet.
(N)
Observaciones
Referencia
14
Alejo y Piquer
(2010)
21
Inferencia realizada de la
Salaberri (2010)
978-84-695-8363-0
Metodologa
Organizacin y coordinacin
Conocimiento cultural
Comunicacin intercultural
Destrezas para tratar la
diversidad
Destrezas de mbito tecnolgico
Evaluacin
1339
Pas Vasco
Destrezas lingsticas
Destrezas metodolgicas
Destrezas personales
Conocimiento
36
Catalua
Competencia pedaggica
especfica en el rea de la
especialidad
Competencia comunicativa
pedaggica
Destrezas de colaboracin inter
rea
Destrezas profesionales
Inferencia realizada de la
descripcin hecha por los
autores
sobre
los
programas de formacin
de profesorado AICLE del
Pas Vasco
Creado como uno de los
criterios utilizados para la
seleccin del contenido a
cubrir en un plan de
formacin de docentes
AICLE. Extrado de las
entrevistas mantenidas
con mentores y alumnado
de dicho programa
Ball y Lindsay
(2010)
Escobar (2010)
Tabla 2
Fichas de contenido de los modelos tericos de competencias del maestro AICLEinternacionales
Localizacin
Finlandia
Austria
Finlandia
(Coord.)
Reino Unido
Francia
Espaa
Italia
Blgica
Rumana
Hungra
Irlanda
Austria
Alemania
Estonia
Dime nsiones
Lengua / Comunicacin
Teora
Metodologa
Entorno de aprendizaje
Creacin de materiales
Enfoques interdisciplinares
Evaluacin
Reflexin personal
Fundamentos AICLE
Conciencia, conocimiento
lingstico y de contenido
Metodologa y evaluacin
Investigacin y evaluacin
Recursos y entornos de
aprendizaje
Manejo de la clase
Gestin, administracin AICLE
Parmetros del programa
Normativa AICLE
Competencias lengua objeto
Desarrollo del trabajo
Trabajo en equipo
Integracin
Implementacin
Adquisicin segundas lenguas
Interculturalidad
Manejo
del
entorno
de
aprendizaje
Enfoque centrado en el aprendiz
en entornos AICLE
Compet.
(N)
Observaciones
Referencia
19
85
Pertenece
al
Marco
Europeo para la Educacin
del Profesorado AICLE,
creado con el objetivo de
proporcionar un conjunto
de principios e ideas para
disear el currculum para
el desarrollo profesional
AICLE
Marsh,
Mehisto, Wolff
y
Frigols
(2011)
29
Bertaux,
Coonan, Frigols
y
Mehisto
(2010)
Bulgaria
Espaa
(Coord.)
Finlandia
Holanda
Portugal
Rumana
978-84-695-8363-0
37
1340
Roza (2007)
Resultados
Han sido un total de 56 dimensiones y 245 competencias objeto de descripcin y
comparacin (ver tabla 3), fluctuando los modelos desde un mnimo de 4 dimensiones (Pas
Vasco y Catalua) y 4 competencias (Catalua) a un mximo de 14 dimensiones (The CLIL
Teachers Competences grid) y 85 competencias (European Framework for CLIL Teacher
Education).
Tabla 3
Modelos competenciales de maestro AICLE
Denominacin
Modelo
Extremadura
Modelo Andaluca
Modelo Pas
Vasco
Modelo Catalua
Modelo
European
Dimension
The
Modelo European
Framework for CLIL
Teacher Education
Dime nsiones
1.
2.
3.
4.
5.
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
8.
1.
2.
3.
4.
1.
2.
3.
4.
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
Objetivos
Competencias y conciencia lingstica
Enfoque pedaggico
Evaluacin
Contexto
Lengua
Metodologa
Organizacin y coordinacin
Conocimiento cultural
Comunicacin intercultural
Destrezas para tratar la diversidad
Destrezas de mbito tecnolgico
Evaluacin
Destrezas lingsticas
Destrezas metodolgicas
Destrezas personales
Conocimiento
Competencia pedaggica especfica en el rea de la
especialidad
Competencia comunicativa pedaggica
Destrezas de colaboracin inter rea
Destrezas profesionales
Lengua / Comunicacin
Teora
Metodologa
Entorno de aprendizaje
Creacin de materiales
Enfoques interdisciplinares
Evaluacin
Reflexin personal
Fundamentos AICLE
Conciencia, conocimiento lingstico y de contenido
Metodologa y evaluacin
Investigacin y evaluacin
Recursos y entornos de aprendizaje
Manejo de la clase
Compet.
(N)
14
21
36
19
85
978-84-695-8363-0
8.
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
8.
9.
10.
11.
12.
13.
14.
1341
29
Tabla 3
Modelos competenciales de maestro AICLE
Denominacin
Modelo BeCLIL
Total
Compet.
(N)
Dime nsiones
1.
2.
3.
4.
5.
6.
Contenido
Lengua
Integracin
Aprendizaje
Entorno
Cultura
37
56
245
Dime nsin
Lengua
Metodologa basada en modalidad bilinge
Destrezas personales
Tratamiento de la diversidad
Evaluacin
Herramientas para la mejora de la calidad
docente
Total
f
14
25
2
5
4
%
25,00
44,64
3,57
8,93
7,14
10,72
56
100
978-84-695-8363-0
1342
978-84-695-8363-0
1343
978-84-695-8363-0
1344
Roza, M.B. (2007). Good practice in content and language integrated learning: BeCLIL
(Benchmarking Content and Language Integrated Learning). Gijn: Consejera de
Educacin y Ciencia, Centro del Profesorado y Recursos de Gijn.
Salaberri, S. (2010). Teacher training programmes for CLIL in Andalusia. En D. Lasagabaster
y Y. Ruiz de Zarobe. CLIL in Spain: implementation, results and teacher training (pp.
140-161). Newcastle (UK): Cambridge Scholars Publishing.
978-84-695-8363-0
1345
Resumen
En este trabajo se pretende analizar la valoracin de los estudiantes del Mster Universitario
en profesorado de Educacin Secundaria Obligatoria y Bachillerato, Formacin Profesional
y Enseanza de idiomas matriculados en la Universidad de Jan durante el curso 2012-13
acerca de la formacin inicial recibida en el mbito de la atencin a la diversidad. Para ello,
se ha utilizado una metodologa descriptiva basada en la tcnica de la encuesta y utilizando
para ello, una escala tipo Likert elaborada ad hoc (n=99). Los resultados obtenidos
demuestran la satisfaccin de los estudiantes hacia la formacin inicial recibida en aspectos
vinculados a la atencin a la diversidad; consideran que el Mster les ha servicio para
afianzar su eleccin profesional, sensibilizarse hacia la atencin a la diversidad o mejorar su
formacin. Los alumnos que se han mostrado ms satisfechos con la formacin inicial
recibida, han accedido al Mster por vocacin o con la intencin de obtener un puesto de
trabajo ms estable.
Descriptores: Formacin inicial, Mster Universitario, Atencin a la diversidad, Actitudes.
Abstract
In this paper I analyze the assessment of students faculty Master in Secondary School
Education, Vocational Training and Language Teaching enrolled in the University of Jan
during the year 2012-13 on the initial training received in the field of attention to diversity.
To do this, we used a descriptive methodology based on survey technique and using, for this
purpose, Likert scale developed ad hoc (n=99). The results obtained demonstrate the student
satisfaction to the initial training received in areas related to attention to diversity, consider
that the Master them strengthen service for professional choice, sensitized to the attention to
diversity or improve their training. Students who have been more pleased with the initial
training received, have entered the Masters by vocation or with intent to obtain a more stable
job.
Key words: inicial training, Master`s degree, attention to diversity, attitudes.
978-84-695-8363-0
1346
Introduccin
La formacin inicial del docente de Educacin Secundaria constituye un motivo de
preocupacin en todos los pases de Europa, a pesar de que en Espaa no siempre ha ido
acompaada de medidas adecuadas de transformacin y mejora (Vaillant, 2009). En la
actualidad, la funcin docente ha sufrido una transformacin, de tal modo que el profesor ha
debido asumir nuevas tareas y responsabilidades que le involucran en el funcionamiento del
centro escolar (EURODYCE, 2008); la etapa de Educacin Secundaria tambin ha
experimentado cambios significativos en las ltimas dcadas a travs de la obligatoriedad de
la escolarizacin hasta los 16 aos, reorganizacin de la formacin profesional, modificacin
y actualizacin del currculum, incremento de la diversidad cultural e integracin de alumnos
con necesidades educativas (Gonzlez, Jimnez y Prez, 2010). Este nuevo papel para el que
se tienen que preparar los futuros profesores de Educacin Secundaria no slo est marcado
por una cierta intensificacin de tareas (Hargreaves, 2005) sino que est produciendo el que el
profesor vea cmo su trabajo no responde a las expectativas de aquello para lo que ha sido
formado (Bolvar, 2007).
Tras la promulgacin de la Ley Orgnica 2/2006, de 3 de Mayo de Educacin e
inmersos en este proceso de convergencia europea en Educacin Superior, la formacin
inicial del docente para la etapa de Educacin Secundaria Obligatoria se ha organizado en
torno al desarrollo de un Mster Universitario en Profesorado de Educacin Secundaria
Obligatoria y Bachillerato, Formacin Profesional y Enseanza de Idiomas. Dicha titulacin,
implantada en las universidades andaluzas desde el curso 2009-1, ha servido para paliar
algunas de las deficiencias estructurales organizativas, e incluso, conceptuales que ha venido
arrastrando el sistema de formacin inicial del profesorado de Secundaria desde 1970 con la
implantacin del Curso de Aptitud Pedaggica (Imbernn, 2007). Este nuevo horizonte
formativo, definido por algunos autores como nueva oportunidad formativa para los
profesores de secundaria (Gonzlez Sanmamed, 2009), debe ofrecer a los futuros profesores
unos conocimientos psicopedaggicos y didcticos ms profundos, a la vez que ampla el
perodo de formacin de prcticas docentes (Gonzlez, Jimnez y Prez, 2010). Adems, tal y
como afirman Timostsuk y Ugaste (2010), la formacin inicial del profesorado de Secundaria
supone un espacio en el que el futuro profesor debe aprender los aspectos sociales de ensear
mediante el apoyo a la formacin de la identidad docente. De este modo, dicho Mster ha sido
concebido y planteado para contribuir a esta necesaria renovacin de la enseanza y no slo
para incorporar nuevos profesores al sistema educativo (Vilchez y Gil, 2010). As pues,
constituye un reto esencial mejorar la formacin inicial de aquellos graduados que deciden
orientar su vida laboral hacia la docencia en educacin secundaria (Puelles, 2009), estando
hasta el momento escasamente formados en materias pedaggicas, organizativas e
institucionales propias de la funcin docente (Benso y Pereira, 2003).
Centrados en el mbito de la atencin a la diversidad, hemos de hacer referencia a
estudios relativos al anlisis de la formacin inicial del profesorado a travs de los Cursos de
Aptitud Pedaggica, pues el citado Mster ha sido implantado recientemente en las
universidades andaluzas. As, el estudio realizado por Snchez Palomino (2007) revela cmo
para el desarrollo de una educacin de calidad para todos, no existe una adecuada formacin
inicial del docente para atender a la diversidad, e incluso parten de prejuicios, creencias e
ideas que lo dificultan. Camacho y Padrn (2005) han demostrado cmo son los Licenciados
(tanto de letras como de ciencias) los que muestran mayores carencias en su formacin
respecto al resto de las titulaciones de Maestro en cuestiones referidas a la atencin al
978-84-695-8363-0
1347
978-84-695-8363-0
1348
mujeres matriculadas en el Mster (60.6%). Asimismo, un 63.6% posee una edad inferior a 25
aos y un 20% son mayores de 31 aos. En cuanto a la titulacin de acceso, un 60.6% de la
muestra accedi al Mster tras cursar una titulacin vinculada al mbito de las Humanidades,
un 18.2% relacionada con las Enseanzas Tcnicas, un 10% con Ciencias Experimentales, un
7.1% con Ciencias Sociales y Jurdicas y, un porcentaje algo inferior (4%) con Ciencias de la
Salud. Finalmente, y en cuanto a las razones por las que afirman haber accedido al Mster, un
48.5% de la muestra revela cursar dicha titulacin para poder optar a un puesto de trabajo
estable, mientras que un 34.6% lo ha hecho por vocacin, un 6.2% por influencia de algn
familiar vinculado a la docencia, un 4.6% por influencia de algn profesor que le haya
marcado en su formacin, un 3.1% por no tener mejor salida para su titulacin y, finalmente,
un 1.5% por prestigio o, simplemente, para diversificar la docencia.
El plan de estudios del Mster Universitario en profesorado de Educacin Secundaria
Obligatoria y Bachillerato, Formacin Profesional y Enseanza de Idiomas de la Universidad
de Jan, consta de un mdulo genrico en el que se incluye la asignatura denominada
Procesos y contextos educativos. Es en esta materia dnde tiene cabida el estudio de
contenidos propios del mbito de la Educacin Especial en la formacin de los docentes de
Educacin Secundaria. Por ello, y para la aplicacin del cuestionario a la muestra, se tuvo en
cuenta el que los estudiantes hubiesen cursado ya esta materia obligatoria para todas las
especialidades durante el primer cuatrimestre del curso 2012-13.
Resultados
Con la intencin de analizar las valoraciones del alumnado del Mster Universitario en
profesorado de Educacin Secundaria Obligatoria y Bachillerato, Formacin Profesional y
Enseanza de Idiomas acerca del proceso de atencin a la diversidad, se han examinado las
puntuaciones de las medias y desviaciones tpicas obtenidas en cada uno de los tems del
cuestionario.
Las puntuaciones medias demuestran cmo el alumnado encuestado manifiesta, en lneas
generales, que es un deber del centro educativo atender a todo el alumnado (M=1.46;
D.T.=1.003). Del mismo modo, se constata que para este alumnado se requiere trabajar de
manera colaborativa entre todos los profesionales del centro educativo en aras de la atencin a
la diversidad (M=1.56; D.T=.883). Entre los aspectos y factores que el alumnado del Mster
universitario en profesorado de Educacin Secundaria Obligatoria y Bachillerato, Formacin
Profesional y Enseanza de Idiomas afirma son importantes para un proceso de atencin a la
diversidad de calidad se destaca: coordinacin entre el profesorado (M=1.58; D.T.=.938),
motivacin o inters profesional del docente (M=1.61; D.T.=.879), recursos (humanos y
materiales) suficientes y apropiados (M=1.73; D.T.=.843), formacin inicial sobre atencin a
la diversidad (M=1.73; D.T.=.831), adecuada ratio profesor-alumno (M=1.82; D.T.=.952) y
experiencia previa con alumnos con necesidades educativas especiales (M=2.01; D.T.=.827).
En cuanto a la modalidad de escolarizacin para el alumnado con necesidades especficas de
apoyo educativo, el alumnado encuestado se muestra dividido ya que existe alumnado que
considera que una opcin es combinar la escolarizacin del alumno entre el aula ordinaria y el
aula de apoyo (M=1.97; D.T.=.839) y quines piensan que este tipo de alumnos estaran mejor
atendidos en los centros especficos de Educacin Especial (M=2.65; D.T=.918).
Los tems con medias ms elevadas (entre 2.33 y 2.48) coinciden con los que hacen
referencia a la formacin recibida por el docente. El alumnado encuestado sostiene que su
formacin sobre atencin a la diversidad es la adecuada respecto a: agrupamiento de alumnos
978-84-695-8363-0
1349
1
2
3
4
Vocacin
11.1
53.3
33.3
2.2
Prestigio profesional
100
Acceso a un puesto estable
11.1
44.4
38.1
6.3
No tener otra opcin
50
50
Influencia de algn familiar
12.5
25
62.5
12.5
50
37.5
que es o ha sido docente
Por influencia de algn
profesor que me ha marcado
16.7
50
16.7
16.7
16.7
50
33.3
en mi formacin
Diversificar la formacin
100
100
1=Plenamente de acuerdo; 2=de acuerdo; 3=en desacuerdo y 4=totalmente en desacuerdo.
Fuente: Elaboracin propia
Por su parte, la Tabla n2 expone cmo los estudiantes que afirman tener un
conocimiento favorable sobre legislacin relativa a atencin a la diversidad, han accedido al
Mster por prestigio profesional, no tener otra opcin mejor tras haber finalizado su titulacin
o bien por influencia de algn profesor que les ha marcado en su proceso formativo (100%
respectivamente) as como por influencia de algn familiar que es o ha sido docente (62.5%).
Finalmente, el alumnado que afirma tener un conocimiento adecuado sobre los recursos y
978-84-695-8363-0
1350
servicios prestados desde el sistema educativo atestigua acceder al Mster por influencia de
un profesor que ha marcado en su formacin (83.4%), no tener otra opcin mejor (75%) o
para poder acceder a un puesto de trabajo estable (63.4%).
Tabla 2
Distribucin de frecuencias para el anlisis de contingencia
Legislacin sobre atencin a la
diversidad
1
2
3
4
6.7
53.3
35.6
4.4
100
11.1
44.4
38.1
6.3
50
50
Vocacin
Prestigio profesional
Acceso a un puesto estable
No tener otra opcin
Influencia de algn familiar que es
12.5
25
62.5
12.5
25
62.5
o ha sido docente
Por influencia de algn profesor que
16.7
50
16.7
16.7
16.7
66.7
16.7
me ha marcado en mi formacin
Diversificar la formacin
100
1=Plenamente de acuerdo; 2=de acuerdo; 3=en desacuerdo y 4=totalmente en desacuerdo.
Fuente: Elaboracin propia
Discusin
Los resultados aportados en esta investigacin revelan cmo el alumnado del Mster
Universitario en Profesorado de Educacin Secundaria Obligatoria y Bachillerato, Formacin
Profesional y Enseanza Idiomas de la Universidad de Jan pone de manifiesto el deber del
centro educativo para atender a todos los alumnos, prefiriendo trabajar de manera colaborativa
con otros profesionales para el desarrollo de una atencin a la diversidad de calidad. Para ello,
los encuestados consideran que el docente debe arbitrar medidas de coordinacin entre el
profesorado as como disponer de motivacin o inters profesional para poder desarrollar un
proceso de atencin adecuado, debiendo adems contar con recursos suficientes y apropiados
as como con la debida formacin inicial sobre este campo de estudio.
Al preguntar directamente sobre su formacin, los estudiantes del Mster consideran
que han recibido una adecuada formacin respecto a agrupamientos de alumnos; seleccin y
adaptacin de objetivos, competencias y contenidos; medidas y programas de atencin a la
diversidad; organizacin del espacio; seleccin, diseo y prctica de actividades y tareas;
evaluacin del proceso de enseanza-aprendizaje; estrategias metodolgicas y organizacin
del tiempo. Estos datos entran en contradiccin con los aportados en la investigacin de Boix
(2008) quin revela cmo los futuros docentes de Educacin Secundaria reconocen tener un
desconocimiento absoluto acerca del concepto de atencin a la diversidad, factores
relacionados con la heterogeneidad educativa, necesidades educativas especiales, estrategias y
recursos de integracin e inclusin en centros y aulas ordinarias, competencias
metodolgicas, personales y participativas necesarias para transformar el aula y los entornos
de la comunidad de aprendizaje en espacios abiertos al aprendizaje desde el dilogo.
Los encuestados consideran que dicha titulacin les ha servido para tener una mayor
sensibilizacin hacia la atencin a la diversidad, aumentar su inters hacia una mayor
formacin en el mbito de la atencin a la diversidad, as como para afianzar su eleccin
profesional hacia la docencia. En este sentido, tal y como apunta Gonzlez Sanmamed (2009),
el Mster debe ofrecer a los futuros docentes unos conocimientos psicopedaggicos y
978-84-695-8363-0
1351
978-84-695-8363-0
1352
Gonzlez, J.C., Jimnez, J.R. y Prez, H.M. (2010). Diversidad cultural, polticas de
diferencia y desigualdades educativas. En Lzaro, L.M. y Pay, A. (coords.).
Desigualdades y Educacin. Una perspectiva internacional. Valencia. Depto. De
Educacin Comparada e Historia de la Educacin de la Universidad de Valencia.
Hargreaves, A. (2005). Profesorado, cultura y postmodernidad: cambian los tiempos, cambia
el profesorado. Madrid: Morata.
Imbernn, F. (2007). La formacin inicial del profesorado de secundaria sigue siendo un
tema pendiente? Aula de Innovacin Educativa, 161, 5-6.
Johnson, S.M. y Kardos, S.M. (2008). The next generation of teachers: who enters, who stays,
and why. En M. Cochran-Smith, Sh. Feinman-Nemser, Mclntyre, D.J. y Demers, K.E.
(Eds.). Handbook of research on teacher education. Enduring Questions in changing
contexts (pp. 445-467). New York: Rotledge.
Ley Orgnica 2/2006, de 3 de mayo, de Educacin.
Puelles, M. (coord.) (2009). Profesin y vocacin docente: presente y futuro. Madrid:
Biblioteca Nueva.
Snchez Palomino, A. (2007). Investigacin sobre la formacin inicial del profesorado de
educacin secundaria para la atencin educativa a los estudiantes con necesidades
especiales. Revista interuniversitaria de formacin del profesorado, 59-60, 149-182.
Timostsuk, I. y Ugaste, A. (2010). Student teachers`profesional identity. Teaching and
Teacher Education, 26(8), 1563-1570.
Vaillant, D. (2009). Formacin de profesores de Educacin Secundaria: realidades y
discursos. Revista de Educacin, 350,105-122.
Vilches, A. y Gil, D. (2010). Mster de Formacin Inicial del Profesorado de Enseanza
Secundaria. Algunos anlisis y propuestas. Revista Eureka sobre enseanza y
divulgacin de las ciencias, 7(3), 661-666.
978-84-695-8363-0
1353
Resumen
En Chile la formacin de profesores evidencia escasos procesos de reflexin pedaggica y
una falta de contextualizacin de las competencias docentes. El objetivo del estudio fue
explorar cmo el anlisis de la filmacin de clases promueve procesos de reflexin, la
resignificacin y cambio de prcticas docentes, durante las prcticas profesionales de
estudiantes de Pedagoga. La investigacin fue interpretativa, un estudio de caso con
participacin de 8 estudiantes. Se hicieron entrevistas semiestructuras y focus group. Los
datos se analizaron con el programa Atlas-ti 6.2 Las conclusiones muestran que contextos
vulnerables promueven la resignificacin de la tarea docente y disponen a la mejora e
innovacin en el aula. Adems, devela que la dificultad que se experimenta en aulas
vulnerables favorece procesos de reflexin y cambio. Adems, el anlisis de video favorece la
identificacin de tensiones -creencias y acciones y dilemas pedaggicosdidcticos, en el
contexto de la prctica profesional.
Descriptores: formacin profesores, vulnerabilidad, reflexin pedaggica, uso de video y
cambio de prctica.
Abstract
In Chile it is worrying that the scarce evidence of teacher training teaching reflection
processes and lack of contextualization of learning teaching skills. The aim of the study was
to explore how film analysis class promotes reflection processes, the redefinition of the task
and changing teaching practices, professional practices for pedagogy students. The research
was interpretive, a case study involving 8 students. There were semi-structured and focus
group interviews. Data were analyzed using the Atlas-ti 6.2 The findings show that the
prosecution process practice mean promote the teaching task and include the improvement
and innovation in the classroom. Furthermore, it is shown that the difficulty experienced in
classrooms vulnerable favors reflection and change processes. In addition, video analysis
favors the identification of stress-beliefs and actions - and pedagogical-didactic dilemmas in
the context of professional practice.
Keyword: teacher training, vulnerability, reflection pedagogical, use of film and change in
practice.
978-84-695-8363-0
1354
Introduccin
Actualmente, en Chile las instituciones formadoras de profesores no demuestran
cumplir totalmente con los estndares acordados a nivel nacional para la formacin inicial de
profesores. Los informes OCDE (2004; 2009) develan que los enfoques pedaggicos
usualmente utilizados enfatizan la memorizacin de contenidos y el trabajo individual. Se
suma a lo anterior, el Informe de la Comisin Nacional sobre la Formacin Inicial Docente
(2005) que establece que no hay coherencia entre discurso y accin en los formadores de
profesores, lo que denota deficientes procesos reflexivos en los responsables de la formacin.
Por su parte, El Informe del Consejo Asesor Presidencial de Educacin (2006), constata la
insuficiente formacin de la actitud indagatoria y reflexiva en los futuros profesores. Del
mismo modo, se observa una desvinculacin entre formadores y la realidad escolar, lo que no
permite promover un conocimiento profesional fundamentado en un trabajo colaborativo con
otros actores sociales implicados en procesos educativos locales.
Adems, a nivel nacional, el Ministerio de Educacin ha incorporado el componente
reflexivo en distintos documentos para la formacin y ejercicio docente. Es as, que el
proyecto de Fortalecimiento de la formacin Inicial Docente (PFFID) (Avalos, 2001; 2007) y
el Marco para la Buena Enseanza (2003) incluyen la reflexin como un dispositivo para la
mejora de la prctica docente (Cornejo, 2003). Ms recientemente, los Estndares
orientadores para las carreras de Pedagoga y los trminos de referencias para los Estndares
de Desempeo (Mineduc, 2012) incorporan la prctica reflexiva como un componente clave
para fortalecer la profesionalizacin docente. No obstante lo anterior, la investigacin
demuestra que las prcticas pedaggicas en Chile adhieren a una racionalidad tcnica que
reconoce esta actividad curricular como una simple aplicacin de la teora que se aprende en
la universidad. (Grundy, 1994; Latorre, 2005; SanJurjo, 2002).
Los hallazgos anteriores delimitan un problema relevante, especialmente frente a la
evidencia emprica que demuestra la importancia de incorporar el componente reflexivo en la
formacin profesional. (Schon, 1992; 1998; Zeichner, 1999; Prieto, 2004; Perrenoud; 2006).
Una de las causas del problema es el enfoque de enseanza centrado en la memorizacin de
contenidos con escasas oportunidades para la indagacin y la reflexin. Esto segn Brokbank
y McGill (2002) tiene como consecuencia la formacin de profesionales incapaces de
reflexionar sobre su prctica y con una marcada tendencia a desarrollar prcticas rutinarias.
Por otra parte, la investigacin internacional afirma que los estudiantes que
cuestionaron sus acciones docentes, durante su formacin inicial, estarn ms dispuesto a
desarrollar una prctica reflexiva y a innovar durante el ejercicio de su profesin en el futuro.
(Tallaferro, 2006). Finalmente, este proyecto adhiere a los planteamientos de Elliot (2000)
Santos Guerra (2001), Stenhouse (1998) que proponen que la investigacin y la reflexin,
profesionalizan el quehacer del profesor.
En este contexto, surge inters por desarrollar un estudio de caso orientado a explorar
cmo el anlisis de la filmacin de clase promueve procesos de reflexin, la resignificacin
de la tarea y el cambio de prcticas docente durante el desarrollo de prcticas profesionales
de estudiantes de Pedagoga en Biologa y Ciencias Naturales en establecimientos
vulnerables en la provincia de Concepcin
978-84-695-8363-0
1355
Mtodo
Este estudio se desarroll bajo un enfoque de investigacin interpretativo y en
especfico se realiz un estudio de caso intrnseco conforme a la definicin de Stake. (19 ). El
diseo correspondi a un estudio de caso nico y los participantes fueron 8 estudiantes en
prctica profesional de la carrera de pedagoga en Educacin media en Biologa y Ciencias
Naturales que desarrollaron su estada formativa en establecimientos vulnerables en la
provincia de concepcin.
Para la produccin de los datos se utilizaron dos estrategias conversacionales
cualitativas, la entrevista semiestructurada y el focus group. Los datos se analizaron con el
programa Atlas-ti 6.2, cumpliendo con las etapas de codificacin, categorizacin,
interpretacin y teorizacin. Se aseguraron los procesos de saturacin terica dado que se
desarrollaron entrevistas hasta que no emergieron nuevas ideas respecto de los objetivos de
esta parte del estudio.
Resultados
Reflexin, vulnerabilidad y cambio
Es muy interesante observar en el discurso de las estudiantes que desarrollar una
estada de prctica pedaggica en un establecimiento vulnerable provoca una mayor reflexin
sobre sus prcticas que otros escenarios educativos. Esto fundamentalmente por las siguientes
razones:
1) Los procesos de formacin en la universidad no estn focalizados en prepararlas para
enfrentar escenarios de vulnerabilidad y por lo tanto, cuando desarrollan prcticas en esos
escenarios lo aprendido durante su formacin no funciona en esa realidad. Ellas se refieren
a esto diciendo que en la universidad de ensea a trabajar para una escuela soada y
enfrentar la realidad suscita procesos de cuestionamiento de lo que sabe y hace en el aula.
En la universidad se habla poco de la realidad, se trabaja sobre la base de una
realidad soada: un curso en que los chicos no se mueven ponen atencin y tienen
ganas de aprender. La realidad es muy distinta y es difcil llevar lo que est en el papel
a la prctica. Cuando esto nos sucede reflexionamos y actuamos. Focus Group.
Estudiantes) (30:35)
Yo, creo que surgieron estas necesidades porque nunca me haba tocado estar en un
contexto as, por lo que surgi la necesidad de ensear de otra forma, ya que la que
conoca no surta ningn efecto. Entrevista Valeria. (27:9).
2) Por otra parte, cuando ellas se esfuerzan por preparar sus clases y se dan cuenta que no
logran que sus estudiantes se interesen por aprender, esta situacin se constituye en una
experiencia emocionalmente fuerte que provoca en ellas la necesidad de preguntarse, cmo
podran mejorar lo que estn haciendo de forma habitual en la clase? Esto ocurre con mayor
frecuencia en contextos de mayor vulnerabilidad.
El hecho de estar en un liceo vulnerable me hizo preguntarme Cmo yo poda
aportarle a esos alumnos? De qu manera sera ms fcil ensearles? O Cmo yo
978-84-695-8363-0
1356
978-84-695-8363-0
1357
978-84-695-8363-0
1358
978-84-695-8363-0
1359
Se pudo observar adems una diferencia entre observar el propio video y observar
videos entre iguales. En el segundo caso se produce en una cuestin bien particular, el
estudiante que est observando el video del compaero se refiere a lo que observa, a lo que no
observa y lo que infiere a partir de su anlisis. Este discurso es recibido por el otro estudiante
y permite visibilizar aspectos de su actuacin, que en ocasiones no logra ver sin ayuda de un
mediador entre el objeto (video) y su experiencia.
En las reflexiones grupales, donde se toman en cuenta ciertos aspectos que quizs se
olvidan en la autoevaluacin. En los espacios para la visualizacin de las grabaciones
de la clase. Y por supuesto en la comparacin tomando como referencia otras
actuaciones en el aula de clases correctas o modelos de enseanza. Entrevista Valeria.
(25:3)
Pero ms importante es constatar que quien observa un vdeo de un compaero siempre
traer como referente su propia experiencia y la pone en cuestionamiento ms o menos
consciente. Es as que varios de los estudiantes declararon que los videos de sus compaeros
por una parte se constituyeron en espejo de sus propias actuaciones en el aula, pero al
mismo tiempo gatillaban una reflexin sobre sus propias representaciones sobre la
enseanza.
Bueno primero ver qu hago yo, y despusmirarah, falto esto, falta esto
otrotomando de referencia mi propia experiencia la verdad es que a m tambin
me hace reflexionar sobre lo que yo hago y no hago en el aula. Entrevista Mellissa.
(8:12).
Discusin
En Chile y en especial en la regin del Bio Bio hay un alto nmero de
establecimientos
educacionales que se caracterizan por una alta vulnerabilidad y
particularidades tnicas. Actualmente, los centros universitarios de formacin de profesores
no estn respondiendo a los desafos que esto implica a nivel de objetivos de formacin y
desarrollo de competencias docentes. (OCDE, 2009).
Existe suficiente evidencia que demuestra que las prcticas pedaggicas se
desarrollan bajo una racionalidad tcnica que separa la teora y la prctica. (Prieto, Adems, a
pesar de los discursos ministeriales referidos a una prctica reflexiva no se constata en las
prcticas de formacin de profesores claridad de qu significa el componente reflexivo y
cmo se puede lograr este rasgo de la profesionalizacin docente. (Cornejo y Padilla, 2008).
Adems, estudios a nivel nacional coinciden con los resultados de este estudio que
evidencia que los aprendizajes que se adquieren la universidad en muchas ocasiones no
responden a las necesidades en las escuelas reales y se centran ms bien en la memorizacin
de contenidos y no en el desarrollo de competencias asociadas de la indagacin y reflexin.
(Brockbank y Mcgill, 2002)
A partir de los resultados de este estudio se puede concluir que se evidencia emprica
a favor de la incorporacin del video como recurso que estimula la reflexin y posibilita la
resignificacin y cambio de prcticas docentes en el aula.
978-84-695-8363-0
1360
Por otra parte, este estudio tambin contribuye con antecedentes que indican que los
estudiantes de Pedagoga deberan durante su proceso de formacin profesional desarrollar
prcticas pedaggicas en contextos educacionales vulnerables dado que estos ambientes
ponen en cuestionamiento los aprendizajes adquiridos en la universidad.
Del mismo modo, los resultados de este estudio develan el insuficiente vnculo entre
los procesos de formacin universitaria y la realidad escolar. Esto hace que en muchas
ocasiones lo que se aprende en la universidad no tenga validez en los contextos escolares
reales.
Referencias
valos, B. (2001). El desarrollo profesional de los docentes: Proyectando desde el presente
al futuro. Anlisis de Prospectivas de la Educacin en Amrica Latina y el Caribe.
Santiago: UNESCO.
Avalos, B. (2007). El desarrollo profesional continuo de los docentes: lo que nos dice la
experiencia internacional y de la regin latinoamericana. Revista pensamiento
Educativo, 41 (2), 77-99.
Brockbank A. y Mcgill, I. (2002) Aprendizaje reflexivo en la educacin superior. Morata:
Madrid.
Cornejo, J. (2003). El pensamiento reflexivo entre profesores. Revista Pensamiento educativo,
32, 343-373.
Cornejo, J. y A. Padilla. (2008). Reflexin y aprendizaje de la enseanza entre profesores
experimentados y principiantes. En Cornejo, J. y Fuentealba, R. (Eds.), Prcticas
reflexivas para la formacin profesional docente: qu las hace eficaces? (p. 113140) Santiago: Ediciones Universidad Catlica Silva Henrquez.
Elliot, J. (2000). La investigacin Accin en Educacin. Madrid: Morata.
Grundy, S. (1987). Producto prxis del curriculum. Madrid: Morata.
Latorre, M. (2005). La formacin prctica en las titulaciones de maestro. Qu piensan los
futuros profesores? Revista Espaola de Pedagoga, 232, 553-568.
Ministerio de Educacin (2003). Marco para la Buena Enseanza. Santiago de Chile: Autor.
Ministerio de Educacin (2005). Informe Comisin formacin inicial docente. Santiago de
Chile: Autor.
Ministerio de Educacin (2012). Estndares de desempeo para la formacin inicial docente.
Santiago de Chile: Autor.
Ministerio de Educacin (2006) Informe del Consejo Asesor Presidencial para la calidad de
la Educacin. Santiago de Chile: Autor.
978-84-695-8363-0
1361
978-84-695-8363-0
1362
Resumen
Las competencias profesionales son el resultado de combinar los conocimientos, aptitudes y
destrezas tcnicas o habilidades necesarias para ejercer la profesin con las pautas
metodolgicas de proceder y las actitudes fundamentales. El objetivo de nuestro estudio es
conocer la percepcin del alumnado de la Facultad de Ciencias de la Educacin de la
Universidad de Mlaga en relacin con la adquisicin de las competencias bsicas
necesarias para el desempeo laboral de su profesin. Se ha elaborado un cuestionario
online para los alumnos de los distintos estudios de grado, licenciaturas y Mster Oficiales
de Postgrado de Ciencias de la Educacin. Los anlisis a realizar hacen referencia al grado
en que creen que han adquirido o estn adquiriendo, en sus estudios, competencias
profesionales bsicas para el desempeo laboral tales como: capacidad de trabajo en equipo,
responsabilidad, motivacin, autocontrol, capacidad de tomar decisiones, etc.
Descriptores: Competencias profesionales,
Profesionales de Ciencias de la Educacin.
Adquisicin
de
competencias
bsicas,
Abstract
Professional competencies are the result of combining the knowledge, aptitudes and technical
and necessary skills to practise the profession with the methodological guidelines and basic
aptitudes. The aim of our study is to know the perception of the students body of the
University of Educational Sciences in Mlaga (Spain), in relation with the acquisition of the
basic competencies needed for the performance or their profession. It has been elaborated an
on-line questionnaire for students of several degrees (graduate and master) of the studies of
education, in that Educational Sciences University. The data analysis refers to the degree in
which they believe they are acquiring the professional and basic competencies for the
performance of their profession, such as: capacity of teamwork, responsibility, motivation,
self-control, decision making, etc.
Keywords: Professional competencies, Basic competencies acquisition, Professionals of
Educational Sciences.
978-84-695-8363-0
1363
Introduccin
En el momento actual el perfil de los profesionales de la educacin viene determinado
por dos conceptos, capacidad y competencia. La capacidad hace referencia al final de un
proceso en el que se ha dotado al profesional de los conocimientos, procedimientos, actitudes
y valores necesarios para desempear su tarea y la competencia es un proceso variado y
mucho ms flexible que se va alcanzando a lo largo del desarrollo de la profesin generando
nuevas capacidades. Las competencias tienen valor cuando se construyen desde el aprendizaje
significativo y se apoyan en el constructivismo, cuando es el sujeto quien construye su propio
conocimiento.
De los profesionales de la educacin se pide que sea un intelectual, un gua cultural,
un animador, un organizador, un mediador intercultural, etc., y adems que desarrolle unas
competencias profesionales. Entendemos por competencia la capacidad general o
potencialidad adquirida por una persona, que le permite seguir aprendiendo y utilizar lo
aprendido para encarar situaciones y resolver problemas reales (Rul y Cambra, 2007). Ser
competente no es slo ser hbil en la ejecucin de tareas y actividades concretas, sino ms all
de ello, ser capaz de afrontar, a partir de las habilidades adquiridas, nuevas tareas o retos que
supongan ir ms all de lo aprendido (Monereo y Pozo, 2007). En una concepcin dinmica
de las competencias se plantea que: se adquieren, se movilizan y se desarrollan continuamente
y no pueden explicarse y demostrarse independientemente de un contexto, por lo que para ser
competente no basta con saber hacer, se requiere saber ser y actuar holsticamente como
sujeto que hace parte y se integra a esa realidad que quiere comprender (Galvis, 2007).
Para Cecilia Braslavsky (1999) toda competencia involucra al mismo tiempo
conocimientos, modos de hacer, valores y responsabilidades por los resultados. Esto implica
que hay que hacer a los profesionales competentes para un mejor desempeo de su actividad y
para una mejor participacin en la reinvencin y puesta al da de sus centros de trabajo. Para
esto deben tener cinco competencias bsicas:
o
978-84-695-8363-0
1364
A modo de sntesis podemos destacar que en las prximas dcadas los profesionales
de la educacin, en cualquier mbito, debern ser personas con actitud democrtica,
conviccin de libertad y respeto por todas las personas y grupos, con principios ticos slidos,
con consistente formacin pedaggica y acadmica, autonoma personal y profesional. Esto
implica que sus competencias deben hacer referencias a tres mbitos: el intelectual, que
incluye lo cognitivo, lgico y cientfico; el social, con los procesos afectivos, ticos y
estticos; y el interpersonal, que implica la capacidad de aplicar los conocimientos y
comprender a los sujetos.
Para que los profesionales de la educacin alcancen las competencias de este perfil
enunciado, es necesario implementar dispositivos de formacin y entrenamiento que los
comprometan a aumentar sus capacidades de observacin, de prcticas reflexivas, de sentido
propio de la capacitacin, de desarrollo de inteligencias mltiples, de atender a los valores,
etc.
Mtodo
El objetivo de nuestro estudio es conocer la percepcin del alumnado de la Facultad de
Ciencias de la Educacin de la Universidad de Mlaga en relacin con la adquisicin de las
competencias bsicas necesarias para el desempeo laboral de su profesin. Opinamos que
cuanto mayor es el curso que realizan, mayores son las capacidades adquiridas. Para
demostrar esto, consultamos la opinin del alumnado de la facultad de Ciencias de la
Educacin a travs de un cuestionario.
Instrumento
La situacin actual de nuestro alumnado nos preocupa ya que su futuro profesional
estar relacionado con las competencias para las que ahora les damos formacin. Un grupo de
tres profesores universitarios hemos elaborado un cuestionario para averiguar la situacin al
respecto. En la elaboracin del cuestionario piloto se tuvieron en cuenta las siguientes etapas
(Selltiz, 1980:720):
- Decisin sobre qu informacin debe buscarse.
- Tipo de cuestionario que se va a utilizar.
- Redaccin de un primer borrador.
- Revisin de las preguntas.
- Comprobacin previa de los cuestionarios.
- Revisin y determinacin de procedimientos para su utilizacin.
A partir de los fundamentos tericos expuestos anteriormente y de nuestras hiptesis
se elabor una versin de cuestionario que recoga las opiniones y los planteamientos que
presentaban el grupo de profesores en relacin a la opinin de nuestro alumnado con respecto
a las capacidades adquiridas durante el transcurso de su carrera. El equipo de trabajo formado
por tres profesores y expertos en el tema de la docencia universitaria elabor una batera de
preguntas sobre el tema que nos preocupaba distribuida en dos bloques. El cuestionario
978-84-695-8363-0
1365
N DE CUESTIONES
I.
De la 1 a la 5
II.
CONTENIDO
De la 6 a la 33
Para la escala de respuesta se utiliz una tipo Likert. Cada tem se refiere a una
capacidad necesaria para el desarrollo profesional que debe ser adquirida durante la carrera y
podr ser contestado en base a una escala del 1 al 5 donde:
1-
Capacidad no adquirida.
2-
3-
4-
5-
978-84-695-8363-0
1366
Hemos solicitado la sinceridad en sus respuestas por la gran importancia que tiene
para nuestro estudio.
978-84-695-8363-0
1367
de
Conclusiones
Una vez finalizado el anlisis y la valoracin de los jueces seleccionados para ello,
podemos afirmar que el cuestionario que hemos diseado para medir la percepcin del
alumnado de la Facultad de Ciencias de la Educacin de la Universidad de Mlaga, en
relacin con la adquisicin de las competencias bsicas necesarias para el desempeo laboral
de su profesin, gracias al coeficiente de Alfa de Cronbach, tiene una consistencia interna y es
fiable. Por tanto podemos decir que, tras este estudio, el instrumento elaborado puede ser
utilizado para conocer el nivel de capacidades que tiene nuestro alumnado segn el nivel
cursado.
Referencias
Atkinson, T. (2002). Aprender a ensear: habilidades intuitivas y objetividad razonada. En T.
Atkinson y G. Claxton (Eds.), El profesor Intuitivo (pp. 95-112). Barcelona:
Octaedro.
Braslavsky, C. (1999). Bases, orientaciones y criterios para el diseo de programas de
formacin de profesores. Revista Iberoamericana de educacin, 19. Disponible en
<http://www.rieoei.org/oeivirt/rie19a01.htm>
Buenda, L., Cols, L. y Hernndez, F. (1998). Mtodos de investigacin en Psicopedagoga.
Madrid: McGraw-Hill.
Galvis, R.V. (2007). De un perfil docente tradicional a un perfil docente basado en
competencias. Accin pedaggica, 16, 48-57.
Hargreaves, A. (2003). Ensear en la sociedad del conocimiento. Barcelona: Octaedro.
Monereo, C. y Pozo, J.I. (2007). Competencias para (con)vivir con el siglo XXI. Cuadernos
de Pedagoga, 370, 12-18.
Rul, J. y Cambra, T. (2007). Educacin y competencias bsicas. Cuadernos de Pedagoga,
370, 71-80.
Selltiz, C., et al. (1980). Mtodos de investigacin en las relaciones sociales. Madrid: Rialp.
Vilanova, S., Garca M. B. y Seorio, O. (2007). Concepciones acerca del aprendizaje:
diseo y validacin de un cuestionario para profesores en formacin. Revista
978-84-695-8363-0
Electrnica
de
Investigacin
Educativa,
http://redie.uabc.mx/vol9no2/contenido-vilanova.html
1368
9(2).
Disponible
en
978-84-695-8363-0
1369
Resumen
La enseanza y el aprendizaje constituyen un acto indivisible que adquiere sentido en la
relacin, en el contacto humano y en cmo se articula esta relacin (Palomero, 2009). De
este modo, se hace necesario desarrollar las competencias inter e intrapersonales de los
agentes educativos, de forma que las aulas y, por consiguiente, los centros educativos, sean
verdaderos espacios de convivencia (Torrego, 2006; Boqu, 2007; Funes, 2011). Esta
necesidad, implica formar profesores gestores de la convivencia en los centros educativos, lo
que se apoya a su vez en la creacin de programas especficos que promuevan competencias
ligadas a la misma como son: la gestin de conflictos y el desarrollo emocional. Dicha
estrategia puede ser trabajada a diferentes niveles, nosotros abogamos por una prevencin
primaria inespecfica (Bisquerra, 2012), es decir, formar a los futuros docentes de educacin
secundaria obligatoria y postobligatoria, para lo cual diseamos una intervencin a travs
de programas formativos.
Descriptores: Formacin de docentes, competencias, educacin emocional, resolucin de
conflictos.
Abstract
The teaching and learning are an indivisible act that makes sense in the relationship, human
contact and how to articulate this relationship (Palomero, 2009). Thus, it is necessary to
develop inter and intrapersonal skills of educative agents, for classrooms and therefore
schools, will be really places to live together (Torrego, 2006; Boqu, 2007; Funes, 2011).
This necessity, involves training teachers coexistence managers in schools, which in turn
relies on the creation of specific programs to promote skills related to it such as: conflict
management and emotional development. This strategy can be worked at different levels, we
argue for primary nonspecific prevention (Bisquerra, 2012), this is, teach the future teachers
of secondary and post-obligatory education, for which we design intervention through
training programs.
Keywords: Teacher training, competence, emotional education, conflict resolution.
978-84-695-8363-0
1370
Introduccin
Qu supone formar en competencias?
La formacin en competencias supone un enfoque distinto en educacin superior. El
impulso del Espacio Europeo de Educacin Superior (EEES) y la llegada del Plan Bolonia, se
convierten en la puerta de entrada de las competencias en nuestras Universidades. Sin
embargo, su punto de partida es anterior al EEES y lo encontramos en la formacin
profesional. Esto es debido a que una competencia hace referencia a la adquisicin de una
destreza que ha de ser desempeada en un terreno profesional (Carabaa, 2011). Del mismo
modo, definir el trmino competencia no es fcil, al presentar muchas controversias. Nosotros
nos inclinamos por la definicin establecida por De Miguel (2005), quien presenta la
competencia como la unin de tres elementos: intencin, accin y resultado, esta definicin
se presenta esquemticamente en la siguiente Figura 1:
978-84-695-8363-0
1371
978-84-695-8363-0
1372
Contenidos y competencias
Programa de Inteligencia
Emocional. PIE
(1) Potenciar el bienestar personal
y el equilibrio emocional del
profesorado.
(2) Favorecer relaciones
interpersonales saludables en los
contextos escolares.
Competencias:
- Conciencia Emocional
- Regulacin Emocional
- Motivacin
Taller de Convivencia.
E-TALCO
(1) Ayudar a actuar y desarrollar una
prctica educativa acorde con las
necesidades reales.
(2) Potenciar una formacin integral
en los individuos dirigida a la gestin
de conflictos.
Bloques temticos
Competencias
Conflicto
Interaccin en
conflictos
Relaciones con
Autocontrol
978-84-695-8363-0
Empata
Habilidades Sociales
Metodologa
Destinatarios
Temporalizacin
Variables
Instrumentos de medida
1373
uno mismo
Relaciones con los
otros
Direccin de
grupos
personal
Mejora de las
relacin
interpersonal
Interaccin en
conflictos
Estrategias de
resolucin de
conflictos
Estrategias de
resolucin de
conflictos
Presencial: experiencial.
Online y presencial
Estudiantes
30 horas
Saber
Saber ser
Saber
Saber
Saber Ser
Saber
hacer
hacer
Prueba objetiva y
Prueba
Prueba
EMES-C
Prueba
abierta (elaboracin
abierta
objetiva
(Caballo,
abierta
propia)
(supuesto (elaboracin
1987)
(supuesto
TMMS-24
prctico)
propia)
prctico)
(Fernndez Berrocal,
Extremera y Ramos
(2005)
978-84-695-8363-0
1374
978-84-695-8363-0
1375
Campbell, D.T. y Stanley, J.C. (1966). Experimental and quasi-experimental designs for
research.Chicago, IL: Rand McNally. (Traduccin espaola: Amorrortu, Buenos
Aires, 1973).
Campo, A., Fernndez, A. y Grisalea, J. (2005). La convivencia en los centros de
secundaria: un estudio de casos. Revista iberoamericana de educacin, 38, 121-145.
Carabaa, J. (2011). Competencias y Universidad, o un desajuste por mutua ignorancia.
Bordn, 1(63), 15-31.
De Miguel, M. (Dir.) (2005). Modalidades de enseanza centradas en el desarrollo de
competencias. Orientaciones para promover el cambio metodolgico en el Espacio
Europeo de Educacin Superior. (Proyecto EA2005-0118). Servicio de publicaciones:
Universidad
de
Oviedo.
Disponible
en
<http://www.ulpgc.es/hege/almacen/download/42/42376/modalidades_ensenanza_co
mpetencias_mario_miguel2_documento.pdf> Fecha de consulta 07/05/2012.
Extremera, N. y Fernndez- Berrocal, P. (2004). La importancia de desarrollar la inteligencia
emocional en el profesorado. Revista Iberoamericana De Educacin, 33(8), 1-9.
Fernndez Berrocal, P. y Extremera, N. (2005). La inteligencia emocional y la educacin de
las emociones desde el modelo de Salovey y Mayer. Revista Interuniversitaria De
Formacin Del Profesorado, 19(3), 63-93.
Filella, M., Belzile, N., Chen, Y. (2002). Antimony in the environment: Are view focused on
natural waters-I. Occurrence. Earth Science Reviews 57, 125-176.
Funes, S. (2011). Qu es y cmo llevar a cabo la gestin eficaz de la convivencia. En S. Funes
Lapponi (Coord.), Gestin eficaz de la convivencia en los centros educativos (2 ed.,
pp. 27-52). Madrid: Wolters Klumer.
Garrard, W. y Lipsey, M. (2007). Conflict resolution education and antisocial behavior in
U.S. schools: A meta-analysis. Conflict Resolution Quarterly, 25(1), 9-38.
Informe de la Fundacin Marcelino Botn (IFBM, 2008). Educacin Emocional y Bienestar.
Anlisis Internacional. Santander: Fundacin Marcelino Botn.
Mayer, J. D., Roberts, R. D. y Barsade, S. G. (2008). Human abilities: Emotional intelligence.
The Annual Review of Psychology, 59, 507-536.
Mayer, J.D., Roberts, R.D. y Barsade, S.G. (2008). Human abilities: Emotional intelligence.
The Annual Review of Psychology, 59,507-536.
MEC (2007). Orden Ministerial ECI/3858/2007, de 27 de diciembre, por la que se establecen
los requisitos para la verificacin de los ttulos universitarios oficiales que habiliten
para el ejercicio de las profesiones de Profesor de Educacin Secundaria Obligatoria y
Bachillerato, Formacin Profesional y Enseanza de Idiomas. Boletn Oficial del
Estado, 29/12/2007.
978-84-695-8363-0
1376
Palomera, R. et. al. (2008). La inteligencia emocional como una competencia bsica en la
formacin inicial de los docentes: algunas evidencias. Revista Electrnica De
Investigacin Psicoeducativa, 6(2), 437-454.
Palomero, P. (2009). Desarrollo de la competencia social y emocional del profesorado: una
aproximacin desde la psicologa humanista. Revista Interuniversitaria De Formacin
Del Profesorado, 12(2), 145-153.
Prez Juste, R. (2006). Evaluacin de programas educativos. Madrid: La Muralla.
Torrego, J. (2006). La formacin del profesorado ante los retos de la promocin de la
convivencia y la prevencin de la violencia escolar. En A. Moreno (Ed.), La
convivencia en las aulas: problemas y soluciones (pp. 409-433). [Volumen de las
Intervenciones del Congreso: La convivencia en las aulas: Problemas y soluciones,
2005] Espaa: Ministerio de Educacin y Ciencia.
Zaccagnini, J.L. (2008). La comprensin de la emocin: una perspectiva psicolgica. En A.
Acosta, J. M. Arribas, R. Bisquerra, I. Etxeberria, P. Fernndez-Berrocal, F. Lpez
Snchez, R. Yus y J.L. Zaccagnini. Educacin emocional y convivencia en el aula
(31-84). Madrid: Secretara General Tcnica. Ministerio de Educacin, Poltica Social
y Deporte. Secretara de Estado de Educacin y Formacin.
978-84-695-8363-0
1377
Resumen
La propuesta de investigacin aparece por la inquietud hacia la problemtica existente en los
institutos de educacin secundaria obligatoria con la desmotivacin del alumnado, la falta de
inters por el estudio, las conductas disruptivas existentes y las malas contestaciones; entre
muchos otros factores Los conocimientos didcticos y pedaggicos de los docentes tienen
algo que ver? El hecho de contar con pocas estrategias, recursos y tcnicas puede hacer que
los alumnos lleguen a altos grados de desmotivacin que pueden llevar como consecuencia a
problemas de conducta, dejadez en los estudios, falta de inters por aprender As pues, la
presente investigacin tiene como objetivos bsicos detectar las dificultades didcticas que
presentan los docentes de secundaria y la valoracin que tienen de la didctica y la
pedagoga como parte importante en la formacin tanto de los alumnos como de su propio
desarrollo profesional docente. El enfoque metodolgico desde el cual se aborda este estudio
es el biogrfico narrativo dentro de la metodologa cualitativa; los sujetos objeto de estudio
son docentes de secundaria de institutos pblicos de la provincia de Alicante a quienes se les
pasa una entrevista abierta, flexible, dinmica y en profundidad con cuatro cuestiones. Los
resultados demuestran la importancia de la didctica y la pedagoga dentro del proceso de
formacin del profesorado.
Descriptores: Formacin, Didctica, Pedagoga, Secundaria, Desarrollo profesional.
Abstract
The research proposal appears to concern the problems in the compulsory secondary schools
with students' lack of motivation, lack of interest in the study, existing disruptive behaviors
and bad answers, among many other factors Do didactic knowledge and teaching of teachers
have something to do? The fact that we have few strategies, resources and techniques that
students can reach high levels of motivation that can lead due to behavioral problems,
carelessness in studies, lack of interest in learning ... So, this research has basic objectives
detect didactic difficulties presented by high school teachers and their rating of didactics and
pedagogy as an important part in the formation of both students and their own professional
development. The methodological approach from which this study addresses is the
biographical narrative within qualitative methodology, the subjects under study are
secondary teachers in public schools in the province of Alicante who have passed an
978-84-695-8363-0
1378
interview open, flexible, dynamic and thoroughly with four questions. The results demonstrate
the importance of teaching and pedagogy within teacher education process.
Keywords: Education, Teaching, Pedagogy, School, Professional development.
Introduccin
Actualmente asistimos a innumerables cambios dentro del contexto en el que vivimos
que afectan, muy especialmente, al campo educativo. Especialmente, en los ltimos aos, el
sector que ha concitado mayor atencin y mayor preocupacin, ha sido el de la educacin
secundaria obligatoria (ESO) (Teixid, 2001). El anlisis de la complejidad de un instituto de
educacin secundaria obligatoria pasa por analizar diversos factores influyentes dentro de la
formacin del alumnado y que son causantes de la actual preocupacin: el contexto, factores
sociales, factores mentales y los factores propios de la intervencin del profesor:
programacin, ejecucin y evaluacin, es decir, la dimensin pedaggica (Medina, 1995;
Cabello, 1996). Sobre este ltimo apartado se centra la presente investigacin: la relevancia
de la formacin pedaggica y didctica dentro del desarrollo profesional docente de un
profesor de secundaria y cmo afecta esto dentro del aula.
En relacin con esta idea, numerosas son las cuestiones que se plantea Tardif (2004)
sobre el profesorado de educacin secundaria obligatoria (LOE, 2006) Qu conocimientos
sirven de base al oficio de profesor? Tratan nicamente aspectos bsicos o ms bien se
centran en la discusin, el saber hacer y las habilidades? Cmo se adquieren esos saberes?
A travs de la experiencia profesional, de la formacin recibida en un curso, en la
universidad o por otras fuentes? Cul es el papel de los saberes docentes en relacin con los
dems conocimientos propios de la actividad educativa? En la etapa pre-profesional,
actualmente, en el sistema educativo espaol, se ha elaborado el mster universitario en
profesor de educacin secundaria obligatoria de un ao de duracin con perodo de prcticas
en un instituto (LOE, 2006), el cual capacita a todos los licenciados para la obtencin del
ttulo de profesionales de especializacin didctica y acredita con los certificados de
cualificacin pedaggica y aptitud pedaggica, todos ellos avalados por la universidad y por
el Ministerio de Educacin. Este nuevo plan de estudios, sustituye el antiguo Certificado de
Aptitud Pedaggica (CAP) a quien se le consideraba escueto y con falta de contenidos
didcticos (Vilches, 2010). Dentro de cada mdulo especfico del mster, existe una
asignatura obligatoria relacionada con la didctica y la materia a impartir con un total de
nueve crditos ECTS. Por ejemplo: si eres licenciado en filologa catalana hay a disposicin
una asignatura titulada: didctica de la lengua. Dentro de todo este proceso de formacin, el
docente debe recibir la suficiente formacin que le acredite como profesor, formacin que
debe ser didctica y pedaggica, centrada en la tarea que posteriormente se va a elaborar.
Atendiendo a Jimnez (2003), uno de los problemas de estos cursos de formacin de
profesores es el hecho de no considerar las diferencias que existen entre el saber que se
declara, el saber hacer procedimental o saber que orienta la intervencin y el saber ligado a la
accin o conducta real (Garca y Cubero, 2000). Muchas propuestas formativas tienden a
considerar, de hecho, que la relacin establecida entre la teora y la prctica es unidireccional
y jerrquica (Porlan y Rivero, 1998); es decir, va desde la teora hacia la prctica, de tal forma
que se llega a pensar que si se pone al profesor en contacto con una serie de fundamentos
disciplinares rigurosos y se le brinda la oportunidad de aplicarlos a la realidad escolar, ste
978-84-695-8363-0
1379
ser por s slo y de manera espontnea capaz de transferir determinados conceptos desde el
contexto cientfico al profesional, tanto en el plano mental como en el de la conducta.
Como vemos, existe un cierto desajuste entre la funcin bsica que se asigna a la
enseanza obligatoria y los conocimientos que poseen los docentes de secundaria. Son
mltiples las voces que reclaman un cambio en la formacin de los docentes de secundaria
con diversos matices. Por ejemplo, el Colegio Oficial de Doctores y Licenciados en Filosofa
y Letras y Ciencias de Catalua en el ao 2000 (Teixid, 2001), plantean la necesaria
renovacin del profesorado docente tanto en los inicios de su formacin como a lo largo de su
carrera profesional.
Previamente los problemas deben ser paliados desde la administracin con reformas
sustanciales en los cursos de formacin del docente atendiendo a la definicin y
caracterizacin terico- prctica del conocimiento profesional deseable: no solamente
conceptos de la propia materia sino ms bien, aprender a ensear. Ensear es la accin de
comunicar algn conocimiento, habilidad o experiencia a alguien con el fin de que lo aprenda,
empleando para ello un conjunto de mtodos, tcnicas y en definitiva, procedimientos que se
consideren apropiados (Monereo, 2006), otro cambio debe ser el fomento de la formacin
inicial pero tambin la formacin continuada para su propio desarrollo profesional docentes
donde el profesor sigue formndose y evolucionando dentro de su campo de estudio.
Despus del cambio administrativo, debe ser el docente el que experimente un cambio
para la mejora de la educacin en secundaria. Se trata de avanzar juntos, partiendo de la
realidad, de los problemas diarios, de los intereses del docente y de los alumnos, en definitiva,
de la didctica y la pedagoga, para mejorar el conjunto de habilidades sociales docentes
facilitadoras del trabajo educativo con adolescentes de 12 a 16 aos. As pues, se argumenta
la necesidad de que los docentes se construyan y desarrollen una competencia profesional
adecuada a su estilo personal, es decir, propia para la gestin de aula que es una cuestin
extremadamente compleja, en la cual intervienen mltiples factores (Teixid, 2001). Tres
factores a resaltar como posibles dificultades dentro del aula: obstculos o dificultades
epistemolgicas, asociadas a las dificultades y estructuras del contenido que se ensea;
obstculos psicolgicos, asociados a las caractersticas cognitivas del sujeto que aprende y por
ltimo, y los interesantes para el desarrollo de nuestra investigacin, los obstculos
didcticos, asociados a los dispositivos y modelos de enseanza as como a la capacidad de
recoleccin de diferentes recursos y actividades (Astolfi, 1999).
El docente debe conocer muy bien la materia que imparte pero tambin poseer el
conocimiento didctico de cada uno de los contenidos (Mellado, 1996). El conocimiento
profesional que se desea es un conocimiento epistemolgicamente diferenciado, resultado de
la integracin de las teoras, la accin profesional y la didctica (suma de saberes acadmicos,
creencias y principios de accin,rutinas y guiones de accin y teoras implcitas) (Porln,
Rivero y Martn del Pozo, 1998). Por ltimo, una de las dificultades ms notables que tienen
los profesores de secundaria es la escasez de recursos para la incentivar la motivacin.
Actualmente, el docente debe enfrentarse al proceso de enseanza a partir de ensear a
aquellos que quieren y a aquellos que no. Esta circunstancia lleva al docente a tener que
resolver situaciones a las que no est acostumbrado. El implantar en las escuelas una
enseanza participativa y motivadora, donde las nuevas tecnologas tengan un espacio
relevante podra aumentar el inters de nuestros alumnos/as y como consecuencia cambiar su
actitud frente a la educacin y a las personas que la imparten y contribuira a mejorar las
tensiones dentro del grupo.
978-84-695-8363-0
1380
Por tanto, los objetivos que persigue la presente investigacin son: Identificar el
conjunto de conocimientos didcticos de los profesores de educacin secundaria obligatoria y
sus dificultades as como conocer las necesidades que tienen en el aula e interpretar las
valoraciones a cerca de la didctica. Por consiguiente, las cuestiones de investigacin son:
cul es la formacin didctica de los profesores de secundaria? Existen dificultades
didcticas y pedaggicas entre los profesores de educacin secundaria? Cules son? Qu
necesidades didcticas necesitan los profesores de secundaria para su formacin? Los
alumnos se sienten motivados ante las estrategias utilizadas por el docente? Y, por ltimo,
qu valoracin dan los docentes de secundaria a la didctica?
Mtodo
El enfoque metodolgico desde el cual se ha abordado este estudio ha sido el
biogrfico narrativo dentro de la metodologa cualitativa; de este modo, se ha avanzado en la
investigacin desde lo particular y detallado, concedindole al sujeto individual todo el
protagonismo y entendiendo que los seres humanos somos organismos contadores de
historias, organismos que, individual y socialmente, vivimos vidas relatadas (Connelly y
Clandinin, 1995).
Contexto de la investigacin
Un problema autntico y situado orienta el vector de esta investigacin hacia el anlisis
y valoracin de los resultados narrativos de las entrevistas realizadas por docentes de
educacin secundaria obligatoria en funciones de el IES Serra de Mariola de Muro de lAlcoi
durante el curso acadmico, 2012-2013. La intencin primera de este anlisis es descubrir las
dificultades didcticas que presentan los docentes de secundaria en relacin con su formacin,
su desarrollo posterior y su opinin y valoracin a cerca de la pedagoga y didctica como
materias esenciales para la enseanza y en definitiva, para el proceso de enseanza y
aprendizaje.
Las sesiones se han llevado a cabo de la siguiente manera: cuatro sesiones semanales
durante dos semanas con ocho docentes y otra semana con nicamente dos docentes. Cada
una de las sesiones ha sido de una hora dentro del mismo instituto en una sala privada donde
nicamente se encontraban el investigador y el participante. El ambiente de entrevista debe
ser clido, confortable y acogedor y sin sonidos exteriores o personas influyentes alrededor.
Participantes
La muestra ha sido de un total de 10 profesores de los cuales, 4 son hombres y 6
mujeres, con rangos de edad comprendidos entre los 20 y los 60 aos. De la muestra
disponible, dos de los participantes son profesores interinos que aos anteriores no haban
estado en este mismo instituto. Los ocho restantes son funcionarios de carrera con plaza
adjudicada en este mismo centro, algunos de ellos desde hace ya muchos aos. La muestra es
no probabilstica ya que se ha seleccionado de forma intencional como consecuencia de la
voluntariedad de los mismos participantes. No se ha seguido ningn criterio de seleccin,
nicamente que fueran docentes en un instituto de educacin secundaria obligatoria.
978-84-695-8363-0
1381
Instrumento
De las diferentes estrategias de recogida de datos que integran el enfoque cualitativo, se
ha optado por la entrevista directa, abierta, flexible, dinmica y en profundidad (Taylor y
Bogdan, 1992) con cinco cuestiones donde se recogen tanto datos personales y profesionales
como opiniones y valoraciones a cerca de la temtica tratada en esta investigacin:
dificultades didcticas que se presentan en la educacin secundaria como docentes. La
entrevista ha sido elaborada de forma personal por el investigador con preguntas relacionadas
con la propuesta a investigar pretendiendo pues, extraer la mxima informacin con las
respuestas narrativas de los docentes. Se parte de una cuestin inicial a cerca de la formacin
didctica recibida a lo largo de su trayectoria profesional para ir detallando las cuestiones a
posibles dificultades dentro del aula, necesidades, influencia de la didctica y finalmente, la
importancia de la didctica. Como se puede observar, se va de lo general a lo particular para
entrar ms en las opiniones personales de cada uno de los entrevistados.
Resultados
Los resultados que se muestran a continuacin han derivado de los objetivos y de las
cuestiones de investigacin de las cuales se han extrado las categoras y a su vez los cdigos
para analizar las frecuencias de respuesta y los porcentajes. En relacin a la categora 1:
Formacin didctica, han derivado cinco cdigos: licenciatura, CAP, CEFIRE (f=9; 9%),
nada didctico (f=1; 1,1%), compaeros y familia (f=3, 3.3%), personalmente (f=4; 4,4%) y
experiencia (f=2; 2,2,%)
Grfico 1. Frecuencias
Dentro de esta categora, el primer cdigo es: Licenciatura, CAP, cursos CEFIRE.
Nueve de los diez entrevistados afirma poseer algn tipo de formacin didctica mientras que
solamente un sujeto afirma no poseer nada. El sujeto que afirma no poseer ninguna formacin
didctica es el 9 quien expresa: Ninguna, hice formacin del profesorado pero ya hace
muchos aos, tantos que casi ni me acuerdo. De un total de 10 profesores, 7 se han formado
en didctica y pedagoga a partir del Curso de Aptitud Pedaggica (CAP) como por ejemplo
el entrevistado 1 que responde sobre su formacin didctica de la siguiente manera: CAP,
actual mster en profesorado de educacin secundaria, especialidad en geografa e historia.
Para suplir parte de las carencias didcticas que manifiestan que tienen, muchos de los
entrevistados afirman haber realizado algn curso del CEFIRE: Tambin he realizado
muchsimos cursos a lo largo de la carrera profesional, por ejemplo, en los CEFIRES.
Solamente el entrevistado 3 y 7 afirman haber realizado algn curso sobre didctica en los
CEFIRES: Pienso que es muy importante la formacin continuada y sobretodo, en didctica
978-84-695-8363-0
1382
y pedagoga (entrevistado 7). Otra forma de suplir las carencias didcticas es de forma
personal y por el propio inters de la persona para formarse y estar al da, bsicamente esta
formacin autodidacta se hace a partir de Internet, un 4,4% afirma buscar en Internet para
formarse. Est el caso por ejemplo del entrevistado nmero 1 quien afirma: A la hora de
elaborar actividades ldicas, s que he hecho algunas bsquedas personales por Internet.
Para finalizar con esta primera categora, un ltimo cdigo a analizar es el de la
experiencia. Hay quien afirma que a base de experiencia y de aos de trabajo uno aprende
diferentes metodologas, estrategias de actuacin o tcnicas para llevar la clase adelante. Es el
caso de los entrevistados 3 y 4 quienes afirman: A partir de la experiencia en el trabajo, uno
va aprendiendo diferentes herramientas (entrevistado 3).
Para la categora 2: Dificultades
Tabla 2
Frecuencias y porcentajes correspondientes a la categora: dificultades
Pregunta
Cul crees que
son las dificultades
de un profesor de
educacin
secundaria
en
relacin con la
didctica y la
pedagoga de la
enseanza?
Cdigos
Falta
de
didcticas
Frecuencia
9
Porcentajes
9,9%
2,2%
Personales:
temores
1,1%
4,4%
3,3
Problemas
alumnado
Experiencia
destrezas
inseguridad,
con
el
Dificultades
Falta de destrezas
Problema s TIC
Personales
Grfico 2. Frecuencias
978-84-695-8363-0
1383
Grfico 3. Frecuencias
Las frecuencias en relacin con las necesidades quedan bastante igualadas, destaca
sobre todo la necesidad de motivar al alumnado para que realce tareas y tenga inters por
estudiar (f=6). El entrevistado 10 afirma: Muchas veces pienso que no les interesa para nada
lo que les digo y que debo llegar a ellos pero el problema es saber cmo. Por consiguiente,
otra necesidad con respuesta bastante frecuente ha sido la de resolucin de conflictos donde
los docentes no saben cmo actuar en diferentes situaciones cuando los alumnos se alteran y
pierden el control. El entrevistado 5 comenta: a la hora de resolver conflictos de clase que a
veces resulta casi imposible. No s muy bien qu hacer y cmo actuar ni qu ser lo mejor
Los problemas personales (f=5) y con las TIC (f=4) tambin son respuestas frecuentes
dentro de las necesidades. Los primeros de ellos se explican a partir de la respuesta del
entrevistado 3: Este primer trimestre ha suspendido muchsima gente y eso me preocupa. No
solamente son ellos los culpables sino que yo tambin a quien le preocupa que le pasa a sus
978-84-695-8363-0
1384
alumnos y el por qu de los suspensos. Por ltimo, resaltar la frecuencia del cdigo:
necesidades por falta de destrezas didcticas ya que sorprende la baja frecuencia de respuesta
en relacin con las dificultades que los docentes presentaban en este campo. Aqu se puede
concluir que las otras necesidades, anteriormente comentadas, las priorizan ms y las ven
como algo mucho ms necesario.
La cuarta categora a analizar es la de la interaccin y motivacin con los alumnos y
de los alumnos. Esta categora se divide a su vez en cinco cdigos: interaccin positiva (f=6;
6,6%), interaccin negativa (f=4; 4,4%), motivacin positiva (f=5; 5,5%), motivacin
negativa (f=3; 3,3%) y no sabe si existe motivacin (f=1; 1,1%)
Grfico 4. Frecuencias
Grfico 5. Frecuencias
Los resultados son muy positivos y sorprendentes ya que 7,7% de las frecuencias de
respuesta dan una valoracin positiva y decisiva a la didctica dentro de la formacin de los
978-84-695-8363-0
1385
Discusin
Los datos han sido muy positivos ya que la gran mayora de los docentes 9/10 afirma
tener dificultades en relacin con la didctica: falta de recursos, de estrategias de actuacin,
de tcnicas de trabajo Es un alto porcentaje que sustenta la idea inicial de la investigacin
centrada en las dificultades didcticas de los profesores de secundaria.
Otro dato revelador es la escasez de formacin didctica que tienen los docentes a lo
largo de su formacin, todos menos un sujeto coinciden en afirmar que su formacin se
reduce al CAP donde adems confirman, el bajo nivel didctico que all se imparta. Adems,
es relevante resaltar que existe una frecuencia bastante elevada, para la extensin de la
muestra, que confirma que se prepara y forma didcticamente pidiendo ayuda, buscando en
Internet y en los libros, este aprendizaje autodidacta hace visible el inters que tienen estos
docentes por la disciplina y por mejorar su trabajo da a da.
En relacin con las dificultades didcticas, uno de los objetivos que se presentaban en la
investigacin era la deteccin de las mismas. As pues, han salido un total de cinco
dificultades generales como son: dificultades didcticas para ejercer, problemas con las
nuevas tecnologas, problemas personales por falta de seguridad en uno mismo, problemas
relacionados con el inters, motivacin y comportamiento del alumnado y problemas a la hora
de atender la diversidad. Como se puede observar, estas cinco dificultades definen a la
perfeccin qu sucede dentro de un aula de secundaria y a qu se enfrenta el docente. Los diez
entrevistados han dado en el clavo destacando estas cinco. Como consecuencia, como se
haba comentado con anterioridad, las necesidades de los profesores deberan estar en
concordancia con las dificultades pero esto no ha ocurrido as. Ha resaltado por encima de
todo la necesidad de los docentes por motivar a sus alumnos (6,6%) por lo que se detecta
como una preocupacin primordial y fundamental en la labor docente. Las otras necesidades
detectadas entre los docentes de secundaria son: necesidades de tipo didcticas (4,4%),
necesidades relacionadas con las nuevas tecnologas y los problemas que tienen para
utilizarlas (4,4%) frente al 2,2% de dificultades detectadas en la categora anterior,
necesidades personales por falta de seguridad y confianza en uno mismo (5,5%) frente al
1,1% de las dificultades personales y finalmente, necesidades relacionadas con la resolucin
de conflictos (5,5%) en relacin al 4,4% de dificultad en los problemas con el alumnado. Se
observan leves pero notables diferencias entre una categora y otra que puede deberse al grado
de importancia que han dado al responder a las necesidades siendo para ellos relevantes el
hecho de no atender bien los conflictos de los alumnos, los factores personales y la
motivacin del alumnado.
En cuanto a la categora de interaccin y motivacin, resultara obvio que despus de
analizar las necesidades donde los docentes expresan su necesidad por motivar al alumnado
que la motivacin negativa, es decir, la falta de motivacin, resaltara por encima de las dems.
Otra vez nos encontramos con la situacin de que lo esperado no son los resultados finales.
Sobresale la motivacin positiva del alumnado en un 5,5% frente a la motivacin negativa
con un 3,3%, es decir, una frecuencia de 5 frente a una de 3, respectivamente. El hecho se
podra deber a que una cosa son las necesidades que el profesor cree que tiene y la otra es,
cmo ve a los alumnos en clase queriendo pensar que stos estn motivador e interesados por
lo que hacen dentro de la clase. Adems, y en relacin con este ltimo apartado, un 6,6%
978-84-695-8363-0
1386
considera que la interaccin entre ellos y los alumnos es positiva y buena frente a un 4,4%
que la consideran negativa. Si hacemos una revisin rpida de las narrativas podemos
observar que tres de los entrevistados que expresaban su preocupacin por la motivacin
negativa de los alumnos son coincidentes en la respuesta de interaccin negativa: el 3, el 9 y
el 10 por lo que manifiestan un claro malestar con la relacin de los alumnos y la motivacin
de los mismos.
Adems de todos estos resultados, cabe sealar los datos de la categora valoracin de
la didctica donde un 7,7% responden que la ven como algo positivo y decisivo dentro del
proceso de enseanza y aprendizaje frente a un 3,3% que aseguran que es positiva pero no
decisiva ya que existen otros factores ms importantes como es el hecho de ensear
conceptos. El hecho de que docentes con escasez de formacin didctica opinen que la
didctica es fundamental dentro del proceso de desarrollo profesional docente de un profesor
de secundaria obligatoria hace repensar todo el sistema educativo actual sobre se sustenta el
actual plan de estudios en relacin con las licenciaturas o mster en profesor de educacin
secundaria obligatoria. Las licenciaturas, muchas de las veces forman a futuros docentes y es
por ello necesario el hecho de instaurar ciertas asignaturas relacionadas con la pedagoga y la
didctica de la enseanza. No se puede afirmar que sean asignaturas obligatorias pero s, por
lo menos, optativas, para que puedan ser elegidas para el camino del futuro profesional
docente. Adems, sera muy conveniente una previa informacin a todos y cada uno de los
matriculados en las diferentes licenciaturas sobre cmo est la situacin didctica dentro de
los institutos. Pero, no solamente con una formacin inicial el docente de secundaria y por lo
general, todos los docentes, deben formarse, en este caso, en materia de didctica. Esto debe
ser un proceso continuado y lineal que debe seguir para el resto de la vida y ms en la
sociedad donde vivimos donde los cambios son notorios y rpidos. El docente con muchos
aos de experiencia no puede ser indiferente a todo esto, y se citan los de mucha experiencia
ya que han aparecido algunas narrativas que han hecho alusin a la experiencia como parte de
su formacin didctica, el docente no debe mantener una postura inalterable sino que debe ser
dinmico como la sociedad, conocer los cambios y circunstancias que envuelven tanto el
mundo educativo como social. Se mueven en una profesin dinmica y abierta al cambio por
lo que ellos mismos deben de ser capaces de entender esta nueva postura (Teixid, 2001). Da
a da salen a escena numerosos paradigmas, mtodos de trabajo, actividades, recursos,
recursos tecnolgicos con los que se deben contar para trabajar. Toda esta formacin extra, es
decir, que se encuentra ya fuera del proceso de formacin inicial por aparecer en una poca
ms tarda, debe ser aprendida ya sea mediante cursos, libros o de forma autodidacta mediante
Internet, herramienta fundamental hoy en da para conocer nuevos ideales. Es obvio y
necesario tener en consideracin que para un docente de secundaria conocer muy bien la
materia que imparte es fundamental, ya no slo para l sino tambin para la mejor
comprensin por parte de los alumnos pero esto es una obviedad que no hace falta ser
estudiada. El problema ha surgido del hecho de que, tradicionalmente, se ha considerado esto
como base fundamental sin pensar en otros aspectos que tal vez, sean mucho ms importantes
que este, como puede ser el caso de la didctica (Tardif, 2004)
Si uno mismo reconsidera todo esto y adems asume el gran papel que tiene la
didctica dentro del mundo de la enseanza, entendida esta como base y pilar fundamental del
trabajo de profesor, se puede llegar a ver una visin mucho ms amplia de la educacin y se
pueden conseguir grandes logros con los alumnos y alumnas de la educacin secundaria
obligatoria, empezando por su motivacin hacia el aprendizaje y el conocimiento y
terminando por la construccin de la persona con sus valores, ideales de vida, normas
ciudadanas que les permiten entrar dentro del mundo social donde estn sumergidos. Es por
978-84-695-8363-0
1387
todo ello, que la didctica juega un papel muy relevante dentro de la formacin de los ms
jvenes as pues, cabe replantearse qu hacer con este sesgo que existe en el sistema
educativo que debe ser paliado y solucionado cuanto antes para poder mejorar as, la
enseanza de los institutos de este pas.
Atendiendo a Tardif (2004) y derivado de todo lo anterior, se llega a la conclusin de
la necesidad de revisar la formacin de los docentes teniendo en cuenta ya no slo los saberes
del profesorado sino tambin, la formacin pedaggica y la realidad especfica de su trabajo
cotidiano.
Referencias
Astolfi, J. (1994). El trabajo didctico de los obstculos, en el corazn de los aprendizajes
cientficos. Enseanza de las Ciencias, 12(2), 206-216.
Cabello, M.J. (1996). El trabajo educativo: de la LOGSE al aula. En J. Fernndez Sierra
(Coord), El trabajo docente y psicopedaggico en educacin secundaria (pp. 89-115).
Mlaga: Aljibe.
Garca, J.E. y Cubero, R. (2000). Constructivismo y formacin inicial del profesorado.
Investigacin en la Escuela, 42, 55-66
Jimnez, R. y Wamba, A. (2003). Es posible el cambio en los modelos didcticos
personales? Revista Interuniversitaria de Formacin del Profesorado, 17(1), 113-131.
Medina, A. (1990). La enseanza y la interaccin social en el aula. Cincel: Madrid
Monereo, C. (2006). Estrategias de enseanza y aprendizaje. Barcelona: Gra.
Porln, R., Rivero, A. y Martn del Pozo, R. (1998). Conocimiento profesional y
epistemologa de los profesores II: estudios empricos y conclusiones. Enseanza de
las Ciencias, 16(2), 271-288.
Tardif, M. (2004). Los saberes del docente y su desarrollo profesional. Narcea: Madrid
Taylor, S.J. Bogdan, R. (1992). Introduccin a los mtodos cualitativos en investigacin. La
bsqueda de los significados. Barcelona: Paids.
Teixid,
J.
(2001). Ser
profesor
de
secundaria
hoy.
http://www.joanteixido.org/pdf/gestio/profesorsecundaria_hoy.pdf
Disponible
en:
978-84-695-8363-0
1388
Resumen
El anlisis de la realidad universitaria ha revelado la necesidad de trabajar nuevos aspectos
formativos en sus aulas. Algunos de estos aspectos hacen referencia, entre otros, a la
vinculacin existente entre los estilos de aprendizaje y el conocimiento y uso de las TIC que
hace el alumnado universitario durante sus aos de formacin en la Universidad. Se ha
realizado una investigacin de tipo cuantitativo y diseo no-experimental utilizando el
cuestionario REATIC, empleando una muestra (N = 325) de estudiantes de segundo curso de
Educacin Primaria e Infantil, de la Facultad de Educacin de Albacete. Tras la recogida de
datos, se realizaron pruebas estadsticas y estudios correlacionales para determinar la
vinculacin entre estilo de aprendizaje, TIC, gnero y especialidad del Grado de Magisterio.
Los resultados obtenidos mostraron diferencias significativas a favor del alumnado de gnero
masculino perteneciente a la especialidad de Educacin Primaria.
Introduccin
La nueva realidad de las aulas universitarias presenta a un alumnado heterogneo en
cuanto a sus capacidades, motivaciones, intereses, procedencia cultural y social, etc., que al
tener distintas necesidades de aprendizaje, precisa una individualizacin de la enseanza y un
acceso al conocimiento a travs de diversas didcticas especficas, acordes con su particular
978-84-695-8363-0
1389
forma de aprender. Para Beltrn (1993), lo que el sujeto sabe hacer con el material objeto de
aprendizaje y la actividad mental que se realiza con ese material, ms all de la mera
repeticin o almacenamiento, es lo que en ltima instancia posibilita el aprendizaje. En este
proceso, el alumno debe poner en funcionamiento un conjunto de estrategias, que varan en
funcin de lo que se quiere estudiar, pero como cada persona tiende a desarrollar unas
preferencias globales, la manera de aprender ser distinta en cada individuo y, por lo tanto,
existirn diferentes estilos de aprendizaje.
En los ltimos aos, han proliferado estudios sobre estilos de aprendizaje (Alonso,
Gallego y Honey, 1994, 1999, 2003) concluyendo que el alumno que mejor conoce su propio
estilo obtiene resultados ms satisfactorios en su forma de aprender y, por lo tanto, puede
organizar su proceso de aprendizaje de manera ms eficaz. En esta lnea, se han realizado
numerosas investigaciones (Rogers, 1975; Resnick, 1981; Kolb, 1984; Nisbet y Shucksmith,
1986; Alonso, Gallego y Honey, 2003; De Moya, 2008) que han puesto de manifiesto que
gran parte de nuestra conducta inteligente es aprendida, y que adems este tipo de conducta se
define en buena medida por la cantidad y sobre todo por la calidad de las estrategias que se
ponen en marcha a la hora de adquirir conocimientos, resolver problemas o relacionarse en la
vida cotidiana.
En el mbito de la docencia universitaria, tradicionalmente se han obviado las
diferentes formas de aprendizaje del alumnado debido, en gran medida, al predomino que ha
tenido la clase magistral y la transmisin prioritaria de contenidos tericos, en detrimento de
otras consideraciones didcticas igualmente relevantes, como son los estilos de aprendizaje y
el clima de clase, a pesar de ser factores que influyen directamente en el proceso educativo
(De Moya et al., 2008). Si se tiene en cuenta este ltimo aspecto, las estrategias didcticas del
docente universitario deberan incidir en el conocimiento de los citados estilos de aprendizaje,
potenciando aquellos que ms se ajusten a las habilidades cognitivas del alumnado, con el fin
de alcanzar un aprendizaje eficaz y significativo. En este sentido, en el marco de la
implantacin del Espacio Europeo de Educacin Superior, Orellana (2002) apunta la
necesidad que tienen los docentes universitarios de desarrollar estrategias para conocer los
estilos de aprendizaje de sus alumnos.
La revolucin tecnolgica del siglo XXI ha abierto nuevas perspectivas a nivel
econmico, social, cultural y educativo, en donde las tecnologas de la informacin y
comunicacin (en adelante TIC) han alcanzado en un corto espacio de tiempo un papel muy
destacado. La globalizacin de la economa, la virtualizacin de la cultura, el desarrollo de
redes horizontales de comunicacin interactiva y la constitucin gradual de la sociedad red
como nueva estructura social son manifestaciones directas de esta transformacin histrica
(Momin et al., 2008).
En el campo educativo, las TIC han renovado las metodologas de instruccin
permitiendo adaptar los contenidos a los diferentes estilos de aprendizaje de los alumnos. No
cabe duda de que la utilizacin de programas multimedia implican innumerables ventajas para
los estudiantes que presentan estilos de aprendizaje diferentes, frente a las metodologas que
se utilizan en la enseanza tradicional (Montgomery, 1995). De esta manera, las TIC han
impulsado el cambio en las metodologas pedaggicas, dando paso a entornos de aprendizaje
virtuales, caracterizados sobre todo por la interactividad entre el conocimiento y estudiante,
que han permitido el desarrollo de nuevas habilidades prcticas y mentales de los alumnos.
As, para Yazn et al. (2002), la utilizacin de la tecnologa potencia un pensamiento
diferente sobre la enseanza y el aprendizaje, siempre que no sea una simple herramienta
978-84-695-8363-0
1390
dirigida por el profesor, sino un aprendizaje centrado en el estudiante. Segn Delors (1996),
las TIC ofrecen a los estudiantes una oportunidad sin precedente para poder responder con la
calidad necesaria a una demanda cada vez ms masiva y diversificada. As, se podrn
desarrollar los diferentes estilos de aprendizaje a partir de las herramientas tecnolgicas ms
adecuadas para cada estilo. As, el e-learning permite la aplicacin de herramientas como los
estilos de aprendizaje con los que s que se consigue un aprendizaje ms efectivo, herramienta
que es difcilmente aplicable en la clase tradicional (Gallego y Martnez, 2003).
En este punto, cabe plantearse las siguientes cuestiones:
-
Estn preparados los alumnos universitarios, y en particular los que estudian el Grado
de Magisterio, para aplicar en la escuela Primaria, ya como docentes, ciertas mejoras
producidas como consecuencia de conocer los estilos de aprendizaje de su grupo
clase?
Son realmente conscientes los universitarios de los beneficios que tienen las TIC en
su formacin o lo consideran un signo de los tiempos o una moda pasajera?
Cules son los conocimientos y destrezas que el alumnado universitario tiene sobre
las TIC, como recurso personalizador del proceso de enseanza-aprendizaje, segn los
diferentes Estilos Aprendizaje?
Mtodo
En la presente investigacin se ha seguido una metodologa de tipo cuantitativo y un
diseo no experimental. Para Cardona (2002) y Bisquerra et al. (2004), en el procedimiento
de anlisis cuantitativo, los datos obtenidos se sitan al margen de interpretaciones y de los
significados que pueda darle el investigador al ser tratados mediante diferentes tcnicas
estadsticas. Se contrastaron datos mediante estudios descriptivos y correlacionales, a partir de
una investigacin realizada en la Facultad de Educacin de Albacete, durante el curso 20112012. Para realizar el estudio se dispuso de una muestra de 325 alumnos del Grado de
Maestro de Infantil (n = 143, 44%) y de Primaria (n = 182, 56%). El alumnado de gnero
masculino supuso un 21.2 % del total de la muestra (N = 69), mientras que el femenino
alcanz el 78.8% (N = 256). Para la eleccin de la muestra se siguieron los criterios de
accesibilidad y disponibilidad muestral, tomando como muestra a todo el alumnado de 2
curso de Grado de Maestro.
En el contexto de la implantacin progresiva del Grado de Maestro, y en el momento
de realizar la presente investigacin, ya se haba realizado un estudio exploratorio con el
alumnado de 1 curso, que nos sirvi para seguir profundizando en estudios emprendidos en
aos anteriores. Como nuestra intencin era continuar en esta lnea, tomamos como muestra
978-84-695-8363-0
1391
Resultados
Para una mejor comprensin de los resultados obtenidos en el presente estudio,
presentamos los mismos ordenados por objetivos de investigacin.
1 Objetivo: Analizar el nivel de conocimientos, usos y actitudes hacia las TIC por parte del
alumnado universitario
Tabla 1
Conocimientos de las TIC del alumnado universitario
ITEM (CONOZCO TIC)
1. Programas bsicos
Nada
Algo
Bastante
Mucho
31.2
62.8
26.8
59.8
6. Buscadores en la red
22.9
64
24.5
66
52.6
28
56.8
43.7
*Datos expresados en %
978-84-695-8363-0
1392
Tabla 2.
Uso de las TIC del alumnado universitario
ITEM (USO TIC)
15. Programas bsicos
16. Programas de interrelacin personal
20. Buscadores en la red
21. Traductores online
24. Editores de pginas web
26. Programas de autor
27. Actividades guiadas en Internet
Nada
Algo
40.2
43.8
52.9
49.1
36.7
34.3
35
39.7
Bastante
12.6
22.3
Mucho
80
72
93.2
*Datos expresados en %
Tabla 3
Actitudes hacia las TIC del alumnado universitario
ITEM (CONSIDERO QUE LAS TIC...)
31. Me perjudican ms que me ayudan en mi
formacin acadmica
33. Me ayudan a mejorar mis resultados
acadmicos
39. No sustituyen a los recursos educativos
tradicionales
41. Son una ayuda para buscar informacin
42. Son tiles para la elaboracin de trabajos
Nada
Algo
Bastante
25.2
50.4
54.5
22.6
Mucho
80
85.2
82.7
*Datos expresados en %
978-84-695-8363-0
1393
Tabla 4
Diferencias en el estilo de aprendizaje y uso de las TIC en cuanto a gnero
ITEM
12. Conozco programas de autor
15. Uso programas bsicos
16. Uso programas de interrelacin personal
17. Uso un blog, un chat, un foro
25. Uso navegadores web
26. Uso programas educativos de autor
31. Considero que las TIC me perjudican ms que me ayudan
en mi formacin acadmica
41. Considero que son una ayuda para buscar informacin
52. Cuando obtengo informacin a travs de la red trato de
interpretarla antes de dar mi opinin
55. Me gusta buscar nuevas experiencias a travs de las TIC
p
.003
.013
.029
.006
.002
.013
.041
Gnero
Masculino
Femenino
M
M
2.30
1.44
3.75
3.60
3.25
3.48
2.40
2.13
3.55
2.36
1.80
1.29
1.30
1.47
.034
.018
3.75
3.15
3.47
2.82
.041
2.90
2.42
Tabla 5
Diferencias en el estilo de aprendizaje y uso de las TIC en cuanto a la especialidad de Magisterio
Especialidad
ITEM
15. Uso programas bsicos
28. Uso de dispositivos multimedia
38. Considero que las TIC me hacen perder mucho tiempo
39. Considero que las TIC no sustituyen a los recursos
educativos tradicionales
48. Disfruto cuando preparo mi trabajo utilizando las TIC
56. Antes de trabajar con las TIC analizo sus pros y contras
58. Es vlido actuar intuitivamente utilizando TIC
60. Procuro obtener conclusiones en mis trabajos con las TIC
Primaria
Infantil
p
.000
.035
.012
.016
M
3.75
2.65
2.19
2.24
M
3.48
2.38
1.85
2.10
.008
.027
.005
.046
2.73
2.09
2.45
2.51
2.83
2.17
2.11
2.54
Conclusiones
Una vez analizado el nivel de conocimientos, usos y actitudes hacia las TIC por parte
del alumnado universitario, los resultados revelan un conocimiento aceptable sobre las TIC
pero no as sobre los programas multimedia, editores de pginas web, programas educativos
de autor y actividades guiadas de bsqueda en Internet. No obstante, es destacable la actitud
del alumnado hacia las TIC, consideradas elemento imprescindible en su vida cotidiana as
como en la sociedad actual; herramienta til para elaborar trabajos, buscar informacin y para
completar sus conocimientos acadmicos.
En cuanto a cmo difieren los diferentes estilos de aprendizaje del alumnado
participante en el estudio el uso que hace de las TIC en funcin del gnero y de la
especialidad del Grado de Magisterio, los resultados reflejan mejores puntuaciones en el
gnero masculino, quizs por la tradicin que asocia el mbito tecnolgico a los varones, y en
la especialidad de Primaria, donde se suele trabajar ms con las TIC. No se ha encontrado un
estilo de aprendizaje predominante asociado al uso de las TIC, si bien los estilos activo y
reflexivo son los ms predispuestos a ellas.
Los resultados obtenidos en esta investigacin contribuyen a ampliar el marco de
estudio sobre estilos de aprendizaje vinculado con el empleo que hacen los alumnos
978-84-695-8363-0
1394
universitarios de las TIC. Estos resultados servirn de base para futuros trabajos en la
Facultad de Educacin de Albacete, al trmino de la implantacin del Grado de Maestro.
Referencias
Alonso, C. M., Gallego, D. J. y Honey, P. (1994). Los estilos de aprendizaje. Procedimientos
de diagnstico y mejora. Bilbao: Mensajero. Universidad de Deusto.
Alonso, C. M., Gallego, D. J. y Honey, P. (1999). Los estilos de aprendizaje. Bilbao:
Mensajero.
Alonso, C. M. y Gallego, D.J. (2003). Cmo diagnosticar y mejorar los estilos de
aprendizaje. Madrid: UNED.
Beltrn, J. (1993). Procesos, estrategias y tcnicas de aprendizaje. Madrid: Sntesis.
Bisquerra, R. et al. (2004). Metodologa de la investigacin educativa. Madrid: La Muralla.
Cardona, M. C. (2002). Introduccin a los mtodos de investigacin. Madrid: EOS.
Delors, J. (1996). Educaci: hi ha un tresor amagat dins. Barcelona: Centre UNESCO de
Catalunya.
De Moya, M. V. et al. (2008). Anlisis de los estilos de aprendizaje de los estudiantes de
Magisterio de Educacin Musical. Comunicacin presentada en el I Congreso de
Educacin e Investigacin Musical. Madrid, IEM-SEM, UAM.
De Moya, M. V., Hernndez, J. R., Hernndez, J. A. y Czar, R. (2009). Anlisis de los
estilos de aprendizaje y las TIC en la formacin personal del alumnado universitario a
travs del cuestionario REATIC. Revista de Investigacin educativa, 29 (1), 137-156.
Gallego, A. y Martnez, E. (2003). Estilos de aprendizaje y e-learning. Hacia un mayor
rendimiento acadmico. Revista de Educacin a Distancia. Disponible en:
http://www.um.es/ead/red/7. Fecha de consulta: 11 de enero de 2012.
Momin, J. M., Sigals, C. y Meneses, J. (2008). La escuela en la sociedad red. Internet en la
educacin primaria y secundaria. Barcelona: Ariel.
Montgomery, S. M. (1995). Addressing diverse learning styles trough the use of multmedia.
Michigan: ASEE/IEEE Frontiers in Education.
Nisbet, J. y Shucksmith, J. (1986). Learning strategies. Londres: Routledge and Kehgan Paul.
Orellana, N. et al. (2002). Estilos de aprendizaje y utilizacin de las TIC en la enseanza
superior.
Disponible
en:
http://reposital.cuaed.unam.mx:8080/jspui/bitstream/123456789/2563/1/117.pdf
Resnick, L. B. (1981). Instructional Psychology. Annual Review of Psychology, 32, 659-704.
978-84-695-8363-0
1395
978-84-695-8363-0
1396
Resumen
Entendemos la formacin del profesorado como el sistema de desarrollo profesional
continuo, basado en la mejora de la prctica docente y en el establecimiento de aquello que
contribuya a la calidad y al rendimiento del aprendizaje de los alumnos. Nuestra
comunicacin parte de la importancia de ensear al profesor tcnicas de coaching como una
estrategia para conseguir mejorar el desarrollo personal de s mismo, de los alumnos y del
grupo-clase. El coaching es un proceso de actuacin que hace aumentar la autoestima, ayuda
a superarse da a da, a reflexionar y nos acerca mediante la comunicacin a reforzar las
relaciones positivas. El profesor como coach trabaja el desarrollo de habilidades, fomenta la
participacin y as se produce una mayor cohesin grupal que contribuye a alcanzar las
metas propuestas. Destacamos a su vez esta herramienta eficaz como medio de motivar a los
alumnos y evitar su abandono en los Ciclos Formativos. Analizamos el coaching profesional,
como desarrollo humano y crecimiento personal mostrando las perspectivas positivas de la
persona y de su potencial humano. Exponemos una experiencia desarrollada en un centro
educativo donde se imparten Ciclos formativos de Administracin y de Informtica.
Terminamos indicando los lmites del mismo que nos hemos encontrado y se apuntan posibles
mejoras.
978-84-695-8363-0
1397
Introduccin
El Coaching es uno de los mbitos de desarrollo profesional con ms crecimiento en
los ltimos aos, constituye una de las estrategias ms utilizadas. En el mundo de los deportes
empez a utilizarse en Estados Unidos hace veinte aos y despus se extendi a distintas
profesiones como proceso de mejora personal.
En esta comunicacin partimos de la importancia de la formacin permanente del
profesor, la mejora de la prctica docente que contribuye a la calidad y al mayor rendimiento
de los aprendizajes de los alumnos.
Nuestro propsito es ensear al profesor de Formacin Profesional tcnicas de
coaching como una estrategia para conseguir mejorar el desarrollo personal de los alumnos y
del grupo-clase porque la consideramos una disciplina eficaz en la produccin de cambios
personales.
Un proceso de desarrollo personal lo entendemos como un conjunto de acciones que
permiten ayudar en el crecimiento profesional y personal.
Entre los diversos procesos de desarrollo de las personas los ms conocidos son el
coaching y el mentoring. Tambin se utilizan el discurso apreciativo, las experiencias de
feedback intensivo, el aprendizaje a travs de la accin y las metforas.
Marco terico
Segn la Encuesta de Mercado de Coaching Ejecutivo 2008, el perfil del coach
profesional espaol se caracteriza por: Equilibrio en el gnero de los coaches (52% hombres,
48% mujeres). Un 64% est en el rango de 31-50 aos. El 56% reside en Madrid y el 21% en
Barcelona. El 39% tiene formacin universitaria en psicologa-sociologa-filosofa, el 22% en
ciencias y el 39% restante en otras. En los hombres predominan un 83% las titulaciones de
ciencias y en las mujeres las de psicologa-sociologa-filosofa en un 65%. El 86% considera
imprescindible tener formacin especfica en coaching y un 13% conveniente. El 43% tienen
1-5 aos de ejercicio profesional, el 32% menos de un ao y el 25% ms de 5 aos.
Comenzaremos definiendo los conceptos de coaching, coach y coachee. El coaching
es un proceso de entrenamiento donde se establecen modificaciones voluntarias en el
comportamiento de las personas. En coaching importa el aqu y ahora, el presente. La
tcnica se basa principalmente en la creencia de que los recursos estn en la propia persona.
Segn Whitmore (2003) la esencia del mismo es ayudar a la persona a aprender en lugar de
ensearle. Explica tambin un planteamiento holstico porque se desea un equilibrio personatrabajo y una clara integracin mente-cuerpo-espritu-entorno por lo cual se incorpora al plan
de accin otras tcnicas como la meditacin y la relajacin.
Se define el coach como la persona que entrena o prepara. En realidad es un facilitador
que ayuda e impulsa a que el alumno alcance sus propsitos y supere sus miedos adems de
978-84-695-8363-0
1398
preparar el camino hacia la consecucin de metas, eliminando aquellas barreras que impiden
su logro.
Llamamos metas a los propsitos, valores y esperanzas que en su mayora son
aprendidos, son prcticos y convertidos en hbitos. Los procesos que intervienen cognitivos,
afectivos y conductuales interactan entre s y afectan al pensamiento (Ellis 1991, 1994).
El coach es la persona experta y el coachee, el colaborador. Un excelente coach
(entrenador) debe adquirir competencias como: madurez personal y profesional, habilidades
sociales, empata, motivacin, escucha activa, perseverancia, tolerancia, realismo,
autoconocimiento de s mismo, buena capacidad de relacin adems de poseer conocimientos
de psicologa y de conducta humana. As como saber gestionar el autocontrol, el miedo al
fracaso, el desconcierto ante los cambios.
Si eres coach, eres lder. Siguiendo a OConnor y Lages un buen coach debe saber
dnde quiere llegar, los objetivos a conseguir as como los valores y creencias implcitos en la
persona que le llevan a realizar algo.
Las creencias las entendemos como generalizaciones acerca de nosotros mismos y de
la realidad de nuestro entorno, que sentimos como verdaderas. Son las normas de nuestra vida
que determinan nuestra conducta. Los valores personales desempean una funcin bsica en
nuestro comportamiento y en nuestra personalidad. Estn vinculados a objetivos y a las
creencias personales de cada uno (Skiffington 2002).
Bandura (1977) dice que en las creencias y en la autoeficacia estn la propia capacidad
para organizar y ejecutar las acciones requeridas para manejar las situaciones futuras. Tal
como indican Valle, Gonzalez y Rodriguez (1999) el verdadero coaching desarrolla la
capacidad de transformar a las personas para que alcancen su mximo potencial y se
produzca un aumento y mejora del autoconcepto, de la autoestima, de la autoeficacia.
Como caractersticas sealamos las siguientes:
- Individual: cada coachee es nico y, sus intereses, caractersticas, plan de accin hecho a
medida.
- Estructurado: Todas las acciones deben organizarse y planificarse siguiendo unas pasos:
relacin, evaluacin, retroinformacin, ejecucin, evaluacin y seguimiento.
- Guiado: segn Lpez Acevedo (2005), el coach ayuda a abordar ciertos cambios. Le
acompaa en todo el proceso, le anima y lo sostiene en las dificultades, el que realiza el
trabajo es el cochee.
La consecucin de las metas: Definir las metas claramente y establecer el plazo de
cumplimiento. Podemos distinguir entre dos perfiles segn la teora del tipo psicolgico de
Myers Briggs Type Indicator: las personas priorizan su lado de sensacin valorando ms una
informacin concreta, poner en prctica procedimientos probados y aquellos que dan
prioridad a su intuicin dirigindose a lo creativo, a nuevas posibilidades.
El coach si quiere ser efectivo tiene que asumir su rol ya que el xito del coach no est en sus
conocimientos sino en los conocimientos que logre despertar en el coachee (Lyons 2001)
978-84-695-8363-0
1399
Objetivos
Dentro de la formacin permanente del profesorado con el fin que se actualice en su
conocimiento se ha desarrollado un seminario desarrollado por un grupo de docentes para
investigar y a la vez practicar. Los profesores se han inscrito en el mismo de forma voluntaria
para dar formacin en coaches y desarrollar nuevas habilidades.
El propsito es comprender lo que significa la prctica de coaching como pilar
fundamental en el seminario de formacin, practicar como coach, desarrollando las
competencias y habilidades necesarias para el ejercicio profesional, que los profesores se
familiaricen con algunas de las herramientas que se aplican en los procesos de coaching, que
adquieran el aprendizaje y la habilidad necesaria, que tomen consciencia para aplicarlas con
posterioridad en la realidad docente diaria, que tengan una formacin bsica de esta temtica
para ayudar a alumnos a que realicen los cambios necesarios, ayudndoles a que definan sus
objetivos.
El profesor debe establecer un aprendizaje en estrategias positivas y un desaprendizaje
de aquellos hbitos que le perjudican.
Mtodo
Los participantes en el seminario fueron veinte profesores de Ciclo Formativo de
Grado Medio y de Grado Superior. Todos trabajan en un Centro de Secundaria cercano a
Alicante. Sus edades estn comprendidas entre 30 y 45 aos. El Seminario ha tenido una
duracin de cinco sesiones estructuradas en cinco semanas, durante el primer Trimestre. En
cuanto al contexto el Seminario fue impartido en el propio Centro educativo fuera de su
horario docente.
Se realizaron prcticas de coaching entre los asistentes, trabajos en equipo e
individuales y lecturas bsicas de las referencias bibliogrficas.
En todo momento, seguimos el mtodo socrtico que funciona haciendo preguntas
para que la propia persona llegue a sus soluciones, haciendo en todo momento de gua y
soporte. Se trata de que el profesor que asiste al seminario interiorice los nuevos conceptos de
esa temtica y las herramientas expuestas. Por ello las intervenciones de los participantes, en
cantidad y calidad, han sido un elemento ms a la hora de fijar su evaluacin global para la
formacin y el entrenamiento de mejora personal.
978-84-695-8363-0
1400
Tcnicas utilizadas
Los participantes en el seminario marcan las pautas segn necesidades. El coach
necesita dominar un amplio abanico de recursos y ponerlos en prctica en el momento
necesario. Se realizaron prcticas de coaching entre los asistentes, trabajos en equipo e
individuales y lecturas bsicas. Las tcnicas utilizadas han sido:
-La escucha activa necesita de aprendizaje y de prctica, como pautas: No prejuzgues, ni
juzgues, da mensajes claros, concisos y concretos, resume siempre los puntos clave, ponte en
su lugar empticamente, crea un clima de total confianza, se objetivo, comuncate con
lenguaje verbal y no verbal, haz formulaciones siempre en positivo utilizando la parfrasis,
que consiste en repetir con palabras del profesor, el mensaje del alumno, sintetizando su
mensaje.
-Saber hacer preguntas. Se aprende a saber preguntar de manera que las preguntas nos
obliguen a reflexionar. Elegimos las preguntas abiertas por considerar que son ms cercanas y
alientan a que nos cuenten sus ideas y reflexiones (mayetica socrtica) porque aseguran una
buena comprensin, facilitan la autoconciencia y el desarrollo personal, adems as se
descubren las verdaderas necesidades y preocupaciones, constituyen una forma positiva de
intervencin. Las preguntas ayudan a crear un feedback como proceso continuado para emitir
una opinin acerca del rendimiento de una persona o sobre cmo se comporta sin dar opinin
sobre las cualidades de la misma; motivan a realizar ms acciones y mejor (Skiffington,
2002).
-La lnea del tiempo. Esta tcnica ayuda a preparar un plan de accin y organizar en un
tiempo concreto, se dice: Imagina por un momento como representaras tu vida. Seala el
punto de tu pasado y el punto donde pondras tu futuro. As se trabaja con una representacin
grfica y anotan sus planes ms inmediatos o a corto plazo.
- Siguiendo a Grow & Whitmore (2003) se trabaja tambin la meta (goal), la realidad
(reality), las opciones (options) y determinar claramente que se har; cuando se har, quin lo
har y la voluntad deseo de realizar lo propuesto
-Tambin se realizan ejercicios con las metforas como recurso, pueden ayudar a influir de
una manera positiva en los dems: los proverbios, ancdotas, citas y ejemplos.
978-84-695-8363-0
1401
Las prcticas y los ejercicios han contribuido a que el alumno experimente, tome
conciencia y reflexione sobre la teora previamente explicada. Con el apoyo del facilitadorcoach, el alumno tendr la oportunidad de profundizar en sus fortalezas y debilidades como
futuro coach, al tiempo que descubrir e incorporar nuevas habilidades, integrando todo lo
aprendido tericamente de forma vivencial.
La gestin de emociones donde podrn constatar cmo influyen en cada uno de ellos
las emociones y cmo las han manejado hasta la fecha. Se utilizan dinmicas grupales con
role-playing en el aula.
En el Seminario se ha trabajado el concepto de coaching, sus objetivos, cmo y
cundo se aplica, qu cualidades debe cultivar un excelente coach y qu herramientas estn a
su disposicin siempre desde la perspectiva educativa. Ejercicios prcticos con casos reales
aplicando el coaching en el mundo real. En todo el proceso de cambio aparecen las cuatro D:
Definicin, Decisin, Disciplina y Determinacin.
Resultados
Se obtuvieron resultados positivos tal como se mostraron en la sesin final. La
experiencia ha servido para aumentar el cooperativismo y la unin del colectivo de profesores
participantes.
Se ha constatado que si queremos empezar a cambiar debemos pensar de manera
diferente. Las nociones de Psicologa aprendidas les han resultado tiles porque dicen que es
necesario hacer hincapi en el conocimiento personal de ellos y de los alumnos, en el
presente y en su entorno.
Piensan que desde el Centro educativo se pueden trabajar los miedos,
comunicacin, el dilogo, el respeto y los valores como ayuda al alumno y a s mismos.
la
Discusin
Se ha debatido acerca del perfil del nuevo profesor entrenado en coaching y piensan
que las actitudes a desarrollar en base a las lecturas estudiadas son: la autoconfianza, la
valenta, la curiosidad y la reflexin para mejorar las fortalezas de saber escuchar, tener una
metodologa precisa y una actitud positiva, sin dar soluciones o consejos sino que ayude a
desarrollar sus propios recursos; tener buenos propsitos y ponerlos en prctica a travs del
ejemplo, con coherencia, reforzar la formacin y la experiencia profesional; ser capaz de
reconocer sus propias emociones, de automotivarse.
Se analiz la frase de Gandhi: si quieres cambiar el mundo cambiate a t mismo y la
disponibilidad de escuchar activamente con respeto y valorando la comunicacin, atento a la
informacin no verbal (gestos, caras), con generosidad y empata.
978-84-695-8363-0
1402
Concluimos: de acuerdo con la experiencia y los resultados parece que este seminario
de iniciacin al coaching como estrategia para el docente ha sido seguido con mucho inters
y ha hecho reflexionar acerca de la tarea docente.
Es preciso detenerse a reflexionar sobre los obstculos y riesgos que nos podemos
encontrar. Apuntamos como una limitacin la corta duracin del mismo. Los procesos de
coaching son procesos cerrados en el tiempo con un principio y un fin predeterminado.
Se recomienda en un futuro se realicen ms seminarios o grupos de trabajo de mayor
tiempo para obtener una mayor visin de esta temtica y profundizacin de la misma. Adems
sera aconsejable validar un inventario en otros centros y realizar un estudio comparativo con
pretest y postest con seguimiento estructurado.
Entre los puntos fuertes de la experiencia destacamos el ensear tcnicas para mejorar
y ayudar al alumno a crecer como persona, al ser este un proceso individualizado que ayuda a
que desarrolle su potencial al mximo, lo cual es personal y nadie lo puede hacer por otro.
Otorga una gran importancia a la preparacin del educador, del coach. El profesor debe tener
vocacin por su trabajo y generar confianza respeto y empata, as como conocer las
necesidades del alumno.
Como propuesta de mejora podramos aadir para prximos seminarios una prueba de
valoracin de la empata a nivel individual que cumplimentara cada profesor participante.
Referencias
Bandura, A. (1977). Self_efficacy: toward unifying theory of behavior change. Psychological
Review, 84, 191-215.
Ellis, A (1994). Reason and emotion in psychotherapy. New York: Birsch Lane Press
Lyons, L. S. (2001). El coaching en el corazn de la estrategia. En M. Goldsmith, L. Lyons, y
A. Freas (Eds.), Coaching. La ltima palabra en desarrollo de liderazgo. Mxico:
Pearson Educacin.
Lyons, y A. Freas (2001). Coaching. La ltima palabra en desarrollo de liderazgo. Mxico:
Pearson Educacin.
OConnor, J. y Lages, A. (2005). Coaching con PNL. Barcelona: Urano.
Ravier, L (2005). Arte y ciencia del coaching. Su historia, filosofa y esencia. Buenos Aires:
Dunken.
Schein, E. H. (2001). Coaching y consultora. son lo mismo?. En M. Goldsmith, L.
Skiffington, S (2002). Gua completa de coaching en el trabajo. Madrid: McGraw-Hill.
Seij (2008). La progresin del coaching en Europa y su perspectiva en Espaa. III
Jornadas Internacionales de Mentoring y Coaching. Madrid: 18 y 19 de noviembre.
978-84-695-8363-0
1403
Webgrafia:
httpp://hbr.harvardbusiness.org/2009/01/what-can-coaches-do-for-you/ar/1
http://www.cylient.com/
978-84-695-8363-0
1404
Resumen
Esta comunicacin presenta los resultados de un trabajo de investigacin cuyo objetivo era
conocer e interpretar la experiencia y expectativas de los futuros maestros, en relacin a su
formacin en y para la educacin global. Para ello, se recogi informacin de 90 estudiantes
de una de las asignaturas del segundo curso del Grado de Maestro en Educacin Primaria,
de la Universidad de Alicante, del curso acadmico 2012/13. El instrumento utilizado para la
recoleccin de los datos fue un cuestionario semiestructurado, administrado on-line en el
momento en que los participantes se encontraban en el ecuador de su formacin inicial. El
enfoque de la investigacin responde a un planteamiento metodolgico cualitativo. La tcnica
utilizada fue la evaluativa, por cuanto interesaba recabar informacin valorativa, referida a
tres grandes ejes temticos: carcter de la formacin recibida, grado de satisfaccin con tal
formacin e inters en el estudio y desarrollo profesional desde la perspectiva de la
educacin global. Los resultados permiten concluir que el alumnado ha abordado algunos
contenidos relacionados con la multidimensionalidad del trmino globalizacin y su
repercusin en los entornos educativos y que, adicionalmente, valoran de manera positiva
esas primeras aproximaciones, aunque consideran insuficiente la formacin recibida y
esperan ampliarla en el transcurso del grado, en su defecto, que el plan de estudios incluya,
en el futuro, una asignatura que aborde estos contenidos de forma especfica.
978-84-695-8363-0
1405
insufficient. They also suggested including a specific subject about global education in the
future curriculum degree.
Keywords: Pre-service
development.
teachers training,
global
education, teacher
professional
Introduccin
La educacin, en tanto que herramienta de enculturacin y proyeccin de las nuevas
sociedades, se convierte en un elemento sobre el que las polticas internacionales vuelcan sus
expectativas de crecimiento. Habitualmente, las polticas educativas han tratado de responder
a los retos emergentes en cada poca. As se refleja, por ejemplo, en la LOE (2006), cuyo
prembulo recoge explcitamente que la preocupacin por atender los requerimientos de la
sociedad no es un asunto novedoso, aludindose tambin a la recurrente concepcin de la
educacin como herramienta de progreso y mejora de la condicin humana, considerada en su
dimensin individual y social. Tras un largo proceso caracterizado por la intensificacin de
los procesos dirigidos a la universalizacin de la educacin (desgraciadamente, todava no es
un derecho que puedan hacer efectivo todos los seres humanos), por la extensin de su
alcance, por la ampliacin de sus metas y por un inters creciente por su calidad y equidad,
en este momento histrico, las sociedades actuales nos enfrentamos a una situacin muy
particular, que es resultado de lo que se ha denominado proceso de globalizacin. La
pregunta relevante, hoy y en este caso, se dirige a conocer el cmo. Es decir, de qu manera
las polticas educativas y sus agentes pueden atender de forma bidimensional ensear y
aprender en y para el reto de la escuela global.
El conjunto matrioskano de sistemas que configura nuestro entorno vital invita a
reflexionar acerca de la influencia que las estructuras ms amplias ejercen sobre las de menor
escala, y a la inversa. Esta arquitectura sistmica, que hasta mediados del siglo pasado se
configuraba en torno a cinco grandes conjuntos, delimitados por elementos fsico-geogrficos
y culturales, se ha polarizado, dando lugar a una construccin unitaria, que refuerza los
discursos sobre la aldea global. De hecho, esta sera la hiptesis sobre la que nos apoyamos
para establecer los vnculos que conectan los mapas social, cultural y educativo, as como las
influencias recprocas que de ellos se derivan. Lo cierto es que la globalizacin econmica,
poltica y tecnolgica est configurando un mapa social y cultural que demanda cambios en
los sistemas educativos y en sus prcticas. Es una opinin ampliamente compartida que la
homogeneizacin de los sistemas, en todos los sentidos, conlleva la transformacin de la
cultura que ahora, especialmente en las sociedades occidentales, podra concebirse como una
macrocultura caracterizada, como afirma Bauman (2007), por el trnsito de la modernidad
slida a la modernidad lquida. Los procesos de globalizacin, multiculturalidad o la propia
revolucin tecnolgica desembocan en la hegemona del eclecticismo acrtico y amoral (Prez
Gmez, 1998), que identifica a nuestro esquema de valores, en detrimento de aquel que
caracteriz los movimientos de la resistencia, que responda a los impulsos de la conciencia
social y a los valores universales como la democracia, la solidaridad, la tolerancia o el
respeto.
Como advierte Tejada (2001), estos cambios tienen una repercusin notable en los
centros educativos. En este momento, el problema es que su magnitud es tal que la adaptacin
continua que se le demanda a la escuela le plantea retos tremendamente complejos. As, por
978-84-695-8363-0
1406
Mtodo
Para el desarrollo de esta investigacin se opt por una metodologa de carcter
cualitativo, por cuanto lo que se pretenda era estudiar en profundidad las aportaciones de los
participantes que respondieran a las cuestiones de investigacin. A su vez, y de forma ms
978-84-695-8363-0
1407
Participantes
En esta investigacin participaron un total de 90 estudiantes del segundo curso del
Grado de Magisterio en Educacin Primaria. Cabe destacar que los datos se recogieron de
cuatro de los ocho grupos que cursaban la asignatura Desarrollo Curricular y Aulas Digitales
de la Educacin Primaria, en la que se haban matriculado 398 alumnos.
Resultados
Los resultados se presentan en dos apartados diferenciados: cdigos demogrficosdescriptivos y cdigos de carcter interpretativo.
978-84-695-8363-0
1408
978-84-695-8363-0
1409
978-84-695-8363-0
1410
Considero que debera aumentar la formacin del profesorado respecto a este mbito. En
la actualidad, esta formacin es ms bien escasa y creo que un docente debera estar
notablemente formado para poder desarrollar una docencia eficaz (Alu_081).
978-84-695-8363-0
1411
Una propuesta podra ser crear canales de habilidades donde la gente ofreciera sus
habilidades a cambio de otras (Alu_049).
Por ltimo, sugirieron mejoras relacionadas con la organizacin de las asignaturas en
los planes de estudios de los Grados de Maestro:
Lo nico que se puede hacer en estos casos es crear estos "Planes de estudio del
Grado de Magisterio" desde cero, basando cada uno de sus puntos y apartados en la
educacin global y contratando gente preocupada y capacitada por y para formar en
la educacin global (Alu_046).
La inclusin de esta temtica en la formacin inicial del profesorado sera muy til
(Alu_068).
Discusin
La discusin de los resultados se presenta de acuerdo con las cuatro cuestiones de
investigacin reseadas:
a) Con relacin a la primera de ellas, relativa al concepto de educacin global que tienen
adquirido los estudiantes del Grado de Maestro, debe resaltarse que no todos los
participantes fueron capaces de definir correctamente ese concepto, lo que nos conduce a
pensar que el trabajo de esta temtica en la implementacin del plan de estudios parece
que responde ms a planteamientos ocasionales o circunstanciales, que dependen ms de
la formacin e importancia que cada profesor/a le concede, que de su presencia nuclear y
sistemtica en las propuestas formativas que se ofrecen a los estudiantes.
b) La segunda cuestin se orientaba a valorar las experiencias que los participantes haban
desarrollando relacionadas con estos contenidos. A juzgar por las opiniones que han
aportado, se aprecian posturas dicotmicas, tanto en la valoracin que se hace del trabajo
realizado con estos contenidos, como en las caractersticas o enfoques con que el
profesorado los ha abordarlo. En todo caso, la mayora expresa que el tratamiento de la
educacin global ha sido ms bien escaso a lo largo de su trayectoria formativa y, en
consecuencia, manifiesta su insatisfaccin que, a su vez, relacionan con la relevancia que
atribuyen a la formacin especfica de los maestros en este mbito.
c) Tambin, en relacin con la cuestin de investigacin anterior, los estudiantes mostraron
un alto grado de acuerdo al estimar la importancia y las consecuencias positivas que su
formacin en educacin global puede tener en su posterior prctica docente. El
convencimiento de que el trabajo de estos contenidos, procedimientos y actitudes se vera
reflejado en su prctica profesional futura ha sido una constatacin destacada y
generalizada.
d) Finalmente, y para responder a la ltima cuestin de investigacin, entre las numerosas
propuestas de mejora que formularon, sobresale una idea reiterada: incluir en los planes de
estudios de los Grados de Maestro una asignatura especfica, que asegure el estudio
concreto de la educacin global. Sus opiniones, recogidas anteriormente, avalan esta
propuesta porque refrendan la relevancia que otorgan a su formacin en educacin global,
fundamentalmente por la repercusin en sus prcticas profesionales.
978-84-695-8363-0
1412
Referencias
Bauman, Z. (2007). Los retos de la educacin en la modernidad lquida. Barcelona: Gedisa.
Brunner, J.J. (2000). Educacin: escenarios de futuro. Nuevas tecnologas y sociedad de la
informacin. Santiago de Chile: PREAL.
Darling-Hammond, L. (2001). El derecho de aprender. Buenas escuelas para todos.
Barcelona: Ariel.
Carvalho, M. (coord.) (2008). Pautas para una educacin global. Conceptos y metodologa
sobre educacin global para educadores y responsables de polticas en materia
educativa. Lisboa: Centro Norte-Sur del Consejo de Europa.
Huber, G.L. (2006). AQUAD 6. Manual del programa para analizar datos cualitativos. Ed.
VerlagIngeborg Huber. Recuperado el 21 de enero de 2011 en:
http://www.aquad.de/spa/manual.pdf
Ibrahim, T. (2005). Global citizenship education: mainstreaming the curriculum? Cambridge
Journal of Education, 35(2), 177-194.
LOE (2006). Ley Orgnica 2/2006, de 3 de mayo, de Educacin. Boletn Oficial del Estado,
04/05/2006.
Prez Gmez, A. (1998). La cultura escolar en la sociedad neoliberal. Madrid: Morata.
Prez-Jimnez, C. (2003). Formacin de docentes para la construccin de saberes sociales.
Revista Iberoamericana de Educacin, 33. Consultado el 30 de marzo de 2013, en:
http://www.rieoei.org/rie33a02.htm
Schweisfurth, M. (2006). Education for global citizensyhip: teacher agency and curricular
structure in Ontario schools. Educational Review, 58(1), 41-50.
978-84-695-8363-0
1413
978-84-695-8363-0
PARTE V
1415
978-84-695-8363-0
1417
Resumen
Se presentan los resultados de una investigacin realizada en 2011-2012 con una muestra
representativa de 365 docentes en la primera medicin, y 90 en una segunda fase. La
metodologa utilizada es cuantitativa; se realiz un anlisis factorial exploratorio para
elaborar una estructura que mide necesidades de capacitacin del personal docente de
secundaria. Tras el anlisis de las respuestas de los tems se propuso un cuestionario
estableciendo dos categoras. La primera, estrategias para la promocin del logro que
incluye los factores: condiciones que favorecen el proceso formativo, apoyo al logro y
aspectos pedaggicos. La segunda son las acciones que enriquecen el ambiente institucional.
Producto del anlisis se elabor un cuestionario que discrimin los tems con porcentajes
bajos en la estructura factorial. En conclusin se propone un cuestionario de 26 tems que
mide los cuatro factores identificados para ser utilizado por profesionales en Orientacin en
el planeamiento de capacitaciones para el profesorado.
978-84-695-8363-0
1418
Introduccin
La importancia de construir un cuestionario que cuantifique las necesidades de
capacitacin del personal docente, para favorecer el involucramiento de las y los estudiantes
en el proceso educativo, nace con la evaluacin de los recursos que poseen estos
profesionales, por medio de una investigacin cualitativa que antecede a la presente. Ese
estudio resalt la importancia de la figura docente en este proceso, que conduce al logro
escolar y a la permanencia en las aulas, y se determin la necesidad de capacitacin que active
esas potencialidades e incluso, quienes tienen los recursos, reconocen la necesidad de
continuar su formacin para responder de forma ms atinada a las necesidades que se
presentan en su quehacer educativo en instituciones educativas.
El trabajo se llev a cabo partiendo de que la deteccin de necesidades de formacin
favorece el planeamiento basado en el establecimiento de prioridades y la emisin de medidas
pertinentes. Adicionalmente, se propone visualizar el asesoramiento como un proceso de
enriquecimiento mutuo entre agentes educativos. Se trata de un trabajo colaborativo para
fomentar los logros del alumnado en las reas personal-social, educativa y vocacional,
incorporando criterios, tanto desde la teora como desde la prctica.
Esta investigacin reporta el proceso de construccin y validacin de un instrumento
para detectar estas necesidades de capacitacin. El objetivo general es elaborar un
cuestionario que permita identificar las necesidades de capacitacin del profesorado de
secundaria en el rea de los recursos docentes para favorecer el involucramiento de
estudiantes en el proceso educativo. Los objetivos especficos son:
1.
Referente terico
El involucramiento es el nivel de participacin e inters del estudiante hacia su
proceso de aprendizaje, as como el grado de conexin que tiene con la institucin educativa.
Tiene componentes conductuales, cognitivos y emocionales, los cuales interactan entre s,
reflejando la integridad propia del ser humano (Fredricks, Blumenfeld y Paris, 2004). Para
referirse al constructo involucramiento, que en ingls se denomina school engagement,
tambin se han utilizado los trminos implicacin escolar, compromiso y enganche
(Gonzlez, 2010). Al involucramiento se le est prestando creciente atencin por la relacin
que guarda con la prevencin de la salida anticipada del sistema educativo y con los
rendimientos de las alumnas y los alumnos. Tambin, se ha observado que favorece la
autonoma y el sentido de pertenencia durante la adolescencia, factores asociados con el
desarrollo saludable, los logros a nivel escolar y el bienestar psicolgico en esta etapa del
ciclo vital (Archambault, Janosz, Morizot y Pagani, 2009).
Los factores que conducen al involucramiento son similares a aquellos que conducen a
la permanencia en Educacin Secundaria, los cuales, a su vez, guardan relacin con las
condiciones para el desarrollo saludable y la preparacin para enfrentar adversidades. La tarea
de ofrecer las condiciones que intervienen en el involucramiento es una responsabilidad
978-84-695-8363-0
1419
compartida. Lo mismo puede decirse del fracaso, se refiere a bajo rendimiento, salida
anticipada o rezago, el cual afecta a un nmero significativo de estudiantes, sobre todo, a
quienes se encuentran en una situacin econmica desfavorable, en cuyo caso se tratara ms
que de un fracaso escolar, de un fracaso social (Martnez-Otero, 2009; Programa Estado de la
Nacin en Desarrollo Humano Sostenible, 2011).
Algunos factores personales para el involucramiento son la motivacin para el logro,
la cual es mediada por las aspiraciones que tenga el alumno o la alumna, y las experiencias
exitosas previas. Asimismo, tener metas de aprendizaje, en contraposicin a solamente metas
de obtener las calificaciones necesarias, favorece la persistencia y la utilizacin de estrategias
autorreguladoras y para la superacin de obstculos (Arguedas, 2010; Lens, Matos y
Vansteenkiste, 2008). A nivel familiar son importantes un clima afectivo, la comunicacin,
las normas razonables y el respeto, un nivel educativo de los progenitores medio o superior y
la ausencia de deficiencias acumuladas producto de la desigualdad de oportunidades tanto a
nivel social como pedaggico (Fernndez, 2009). Con respecto a los factores institucionales,
se han confirmado lo determinantes que son el trato respetuoso y la promocin de la
autonoma, y el riesgo que implican la exclusin y el desafecto (Van Ryzin, Gravely y Roseth,
2009).
Aunque los aspectos pedaggicos y la creacin de ambientes de aprendizaje
estimulantes son esenciales, son igualmente necesarias las intervenciones para favorecer una
autonoma responsable, el esfuerzo sostenido, la tolerancia a la ambigedad y a la frustracin
y la seguridad producto de experiencias de xito (Klem y Connell, 2004; Snchez, 2006).
Como una forma de apoyar en el cumplimiento de esta tarea, nos abocamos a aportar una
herramienta para la deteccin de necesidades de capacitacin del personal docente con miras a
la activacin de potencialidades para favorecer el involucramiento. En base a datos
cualitativos de una investigacin anterior, y de otros estudios consultados, se procedi a la
elaboracin de un cuestionario para facilitar la identificacin de tales necesidades y la
consecuente oferta de opciones para su satisfaccin. Los tems se clasificaron en dos
variables: clima educativo y apoyo para el logro. El clima educativo se refiere a las
caractersticas del ambiente institucional, que pueden ser de tipo estructural, regulatorio y
fsico y se reflejan en la sensacin de bienestar o malestar, las conexiones interpersonales que
se establecen, la organizacin, las normas y las metas educativas. Los climas que ms
favorecen el involucramiento y el desarrollo del estudiante, en general, se basan en las
relaciones respetuosas, favorecen la responsabilidad, son inclusivos y funcionan en base a
normas que facilitan la convivencia y la productividad. El apoyo al logro es un conjunto de
acciones dirigidas hacia la satisfaccin de necesidades de la etapa adolescente, entre las que
destacan la de pertenencia, de oportunidades para enfrentar retos alcanzables y el consiguiente
sentido de competencia personal. El apoyo al logro favorece la edificacin de habilidades en
diversos mbitos y el desarrollo de asociaciones positivas con el aprendizaje, al plantear
tareas relevantes que favorecen la comprensin.
Mtodo
La elaboracin y validacin del cuestionario, para determinar las necesidades de
capacitacin del profesorado de secundaria en el rea de recursos docentes para favorecer el
involucramiento de estudiantes en el proceso educativo, estuvo organizada por varias etapas.
La secuencia se muestra en la Figura 1:
978-84-695-8363-0
1420
978-84-695-8363-0
1421
Participantes
Para la seleccin de la muestra del primer cuestionario se utiliz el muestreo por
conglomerados en una primera etapa, con una seleccin sistemtica de las personas
participantes en un segundo momento. La Regin Educativa de Cartago contaba con 49
colegios y un total de 1336 docentes de todas las disciplinas. Para la seleccin de las y los
docentes en cada centro educativo se utiliz el muestreo sistemtico hasta completar una
muestra de 365 docentes. El segundo cuestionario fue aplicado a 90 docentes de cinco
colegios de San Jos con una seleccin no probabilstica o dirigida.
Anlisis
En primer lugar se realiz un anlisis factorial, cuya estructura agrupaba las variables
que correlacionaban entre s. Se determin si los resultados del cuestionario aplicado tenan la
consistencia interna necesaria para ser considerado un instrumento de evaluacin fiable, para
lo que se utiliz el coeficiente de fiabilidad Alfa de Cronbach. En segundo lugar se analiz la
estructura con que se organizaron los contenidos del cuestionario. El mtodo utilizado fue el
anlisis de componentes principales con rotacin Varimax. Despus de confirmar los
supuestos requeridos para un anlisis factorial exploratorio (KMO= 0.904 y Test de Bartlett
X2 (1830) = 8682.044; = 0.000), se realiz el anlisis excluyendo 24 tems con bajas
puntuaciones factoriales calculadas a partir de la matriz factorial rotada y las comunalidades.
Los 61 tems, que permanecieron en la segunda versin del cuestionario, se agruparon en 4
factores que explican un 41.44% de la varianza total de los puntajes obtenidos.
Resultados
Los resultados obtenidos en el primer cuestionario establecen una estructura
consistente conformada por cuatro factores.
El factor uno hace referencia a las condiciones que favorecen el proceso formativo y
se refiere a un conjunto de condiciones que diversos estudios (Arguedas, 2011; Gonzlez,
2010) han mostrado son tan importantes para el aprendizaje y el logro como los aspectos
cognitivos. Otras reas del estudiante que favorece el personal docente que estn incluidas en
este factor son el grado de inters, la motivacin, la implementacin de prcticas respetuosas
de la diversidad y la atencin de su formacin integral.
El factor dos se refiere a las acciones de apoyo al logro. Uno de los propsitos de
mayor relevancia para el personal docente en su trabajo con estudiantes es que estas y estos
obtengan logros significativos en diversos mbitos. Se destaca la labor del docente en la
provisin de esta ayuda. Este factor enfatiza las acciones destinadas a darle seguimiento al
estudiante, no solamente en el mbito acadmico, sino en el conductual y personal.
El factor tres introduce los tems que hacen referencia a los aspectos pedaggicos
relacionados con la filosofa que sustenta el trabajo educativo y las metodologas utilizadas
por el profesorado. Destacan el planeamiento y la preparacin, adems del manejo de aula por
parte del y la docente. La persona ubicada en esta rea de fortaleza hace evidente su gusto por
ensear y favorece la satisfaccin por aprender. Este factor incluye lo relacionado con la
978-84-695-8363-0
1422
innovacin y el uso de elementos que facilitan el aprendizaje, tales como: partir de los
conocimientos e intereses de las y los estudiantes, realizar actividades variadas. Puede incluir
el uso de material atractivo y tecnologas.
El factor cuatro es el que incluye los elementos del clima institucional, del aula en
particular y de la institucin, en general, que caracterizan las relaciones interpersonales en el
colegio. Se resalta el fomento de la resolucin pacfica de conflictos y de las relaciones
respetuosas y cordiales entre docentes, entre estudiantes y docente-estudiante.
Aspectos pedaggicos
Apoyo al logro
Condiciones que
favorecen el
proceso
formativo:43.8%
0.8%
Aspectos
pedaggi
cos:
28.5%
Clima
institucio
nal:
26.8%
Ambiente
978-84-695-8363-0
1423
Tabla 1
Resultados de la encuesta realizada al grupo de docentes de la RE de Cartago (2012)
Cuestionario total
=0,942
Factor 1: condiciones que favorecen el
=0,839
proceso educativo
Factor 2: apoyo para el logro
=0,865
Factor 3: aspectos pedaggicos
=0,821
Factor 4: clima institucional
=0,752
Conclusiones
El cuestionario de necesidades de capacitacin del profesorado de secundaria en el
rea de recursos docentes para favorecer el involucramiento estudiantil en el proceso
educativo identifica cuatro reas de recursos docentes: condiciones que favorecen el proceso
formativo, apoyo al logro, aspectos pedaggicos y el clima institucional. Se propone
instrumento resumido de 26 tems que mostr tener validez de contenido, pues el proceso de
construccin fue consistente con los resultados de investigaciones anteriores y el juicio de
personas expertas en el tema. Adems, present una confiabilidad positiva y alta para el total
de tems y para cada una de las subescalas. Esto implica que mide las dos variables en estudio
(clima institucional y apoyo al logro) e identifica las necesidades en las reas de formacin
docente.
Los aspectos socio-afectivos, como conocer las formas para fortalecer en el estudiante
el manejo de la frustracin, la consideracin por las situaciones que aquejan al estudiante, el
fortalecimiento de la perseverancia, la comprensin de la desmotivacin y de la falta de
inters y razones de indisciplina en el aula, son aspectos que tienen porcentajes ms bajos de
frecuencia en las acciones que realiza el personal docente. Por su lado, aspectos que tienen
que ver con la atencin a la formacin integral como favorecer la creatividad, fomentar la
participacin en actividades recreativas y estimular el rea artstica del estudiante son
acciones que podran requerir fortalecimiento en el grupo de docentes participantes.
Se hace evidente que en la filosofa que sustenta el trabajo educativo, el grupo de
docentes tiene gusto por la enseanza. No obstante, incluir en el planeamiento actividades
donde se usan varios sentidos, variar las estrategias segn las situaciones y disear actividades
para comprobar la comprensin de lo aprendido resultan ser prcticas y requieren ser
fortalecidas por un grupo pequeo de participantes. Incentivar y favorecer a la totalidad de
los estudiantes en las actividades de la institucin, realizando proyectos por iniciativa propia,
hacindolos sentirse parte importante del colegio, favoreciendo de esta manera el clima
institucional y la relacin docentesestudiantes, as como promover el sentido de pertenencia
son temas que requieren ser fortalecidos en el grupo de docentes encuestados.
Se concluye que se trata de un instrumento que posibilita la identificacin tanto de
fortalezas como de carencias del profesorado de secundaria, en el rea de los recursos
docentes para la promocin del involucramiento del estudiantado en el proceso educativo.
978-84-695-8363-0
1424
Referencias
Archambault, I., Janosz, M., Morizot, J. y Pagani, L. (2009). Adolescent behavioral, affective,
and cognitive engagement in school: Relationship de dropout. Journal of School
Health, 79(9), 408-415.
Arguedas, I. (2010). Promocin de la permanencia de estudiantes en la Educacin Secundaria.
Manual de temas y estrategias. Instituto de Investigacin en Educacin. San Jos,
Costa Rica: Editorial de la Universidad de Costa Rica.
Arguedas, I. (2011). Recursos docentes para favorecer el involucramiento de estudiantes de
Educacin Secundaria en el proceso educativo. Revista Iberoamericana de Educacin,
56(2). Disponible en <http://www.rieoei.org/deloslectores/4216Arguedas.pdf>
Fernndez, T. (2009). La desafiliacin en la educacin media en Uruguay. Revista
Iberoamericana sobre Calidad, Eficacia y Cambio en Educacin, 8(4), 164-179.
Fredricks, J., Blumenfeld, P. y Paris, A. (2004). School engagement: Potential of the concept,
state of the evidence. Review of Educational Research, 74(1), 59-109.
Gonzlez, M.T. (2010). El alumno ante la escuela y su propio aprendizaje: algunas lneas de
investigacin en torno al concepto de implicacin. Revista Iberoamericana sobre
Calidad, Eficacia y Cambio en Educacin, 8(4), 9-31.
Klem, A. y Connell, J. (2004). Relationships matter; Linking teacher support to student
engagement and achievement. Journal of School Health, 74(7), 262-273.
Lens, W., Matos, L. y Vansteenkiste, M. (2008). El profesor como fuente de motivacin de
los estudiantes: hablando del qu y del por qu del aprendizaje de los estudiantes.
Revista Digital de Investigacin en Docencia Universitaria (RIDU), 4(1). Disponible
en <http://beta.upc.edu.pe/calidadeducativa/ridu/2008/ridu5_lm.pdf>
Martnez-Otero, V. (2009). Diversos condicionantes del fracaso escolar en la Educacin
Secundaria. Revista Iberoamericana de Educacin, 51, 67-85.
Parras, A., Madrigal, A.M., Redondo, S., Vale, P. y Navarro, E. (2008). Orientacin
educativa: Fundamentos tericos, modelos institucionales y nuevas perspectivas.
Madrid: Centro de Investigacin y Documentacin Educativa (CIDE) del Ministerio
de Educacin, Poltica Social y Deporte de Espaa.
Pereira, MT. (2007). Orientacin educativa. San Jos: Editorial de la Universidad Estatal a
Distancia.
Programa Estado de la Nacin en Desarrollo Humano Sostenible (Ed.) (2011). III Informe
estado de la educacin. San Jos, Costa Rica: Consejo Nacional de Rectores.
Snchez, M. (2006). De la motivacin y del sndrome del fracaso. En M. Snchez y M. Lpez
(Comps.), De la motivacin y del sndrome del fracaso (pp. 9-12). Mxico:
Universidad Autnoma de la Ciudad de Mxico.
978-84-695-8363-0
1425
Van Ryzin, M., Gravely, A. y Roseth, C. (2009). Autonomy, belongingness, and engagement
in school as contributors to adolescent psychological well-being. Journal of Youth and
Adolescence, 38(1), 1-12.
Villalobos, X. (2011). Reflexin en torno a la gestin de aula y a la mejora en los procesos de
enseanza y aprendizaje. Revista Iberoamericana de Educacin, 5(3), 1-7.
978-84-695-8363-0
1426
Resumen
En el siguiente estudio nos proponemos mostrar los problemas que supone hacer un uso
errneo del coeficiente de fiabilidad alpha de Cronbach, as como ofrecer alternativas
adecuadas a los niveles ordinales de las variables como: el coeficiente alpha ordinales y el
coeficiente theta ordinal estimado sobre la matriz de correlaciones policricas. Llevaremos a
cabo un estudio comparativo en el que se estiman los tres coeficientes de fiabilidad sealados
en el Cuestionario de Estrategias de Aprendizaje para adolescentes del validado en el
estado de Baja California (Mxico), en 44 variables ordinales (tipo Likert). Los resultados
arrojados demuestran que el comnmente utilizado coeficiente alpha de Cronbach es el que
menor valor ofrece (0,874) ya que al tratarse de variables ordinales los coeficientes de
consistencia interna ordinales (apha y theta) no solo resultan los ms apropiados sino que
son los que ofrecen los valores ms altos (apha: 0,946 y theta: 0,910).
978-84-695-8363-0
1427
Introduccin
Para la estimacin de la fiabilidad de una prueba, concretamente de la consistencia
interna de los tems, es necesaria la utilizacin de coeficientes de fiabilidad que nos permitan
cuantificarla. En este trabajo se recogen algunos coeficientes centrados en el conjunto de
tems que conforman la prueba, es decir los coeficientes de consistencia interna, basados en
cuantificar el grado de homogeneidad y de intercorrelacin de los tems, es decir si los tems
de los que se compone el test miden lo mismo, por tanto miden la consistencia de la prueba
(Streiner, 2003; Henson, 2001).
El coeficiente de consistencia interna ms utilizado y el ms comn en la literatura es
el coeficiente alpha de Cronbach (Cronbach, 1951). Este coeficiente tiene una caracterstica
relevante, en torno a la cual gira este trabajo, debe ser utilizado nicamente con variables de
carcter continuo. Constantemente se observan artculos e informes en los que se realizan
anlisis de fiabilidad con el coeficiente alpha de Cronbach sin valorar el nivel de medida de
las variables que van a ser estudiadas. Ese error es muy frecuente sobre todo en ciencias
sociales, donde es muy comn que escalas de respuesta ordinal se consideren como variables
de intervalo lo que afecta a una incorrecta utilizacin de los coeficientes de fiabilidad
(Cortina, 1993; Obsburn, 2000; Sijtsma, 2009). Ante este panorama, se resalta la existencia de
alternativas adaptadas al nivel de medida, en concreto coeficientes de fiabilidad para variables
de escala ordinal; stos se denominan coeficientes de fiabilidad ordinales. En este estudio se
recogen los ms comunes: el coeficiente alpha ordinal (McDonald, 1985) y el coeficiente
theta ordinal (Amor, 1974), que a continuacin, junto con el conocido alpha de Cronbach, se
detallan brevemente.
978-84-695-8363-0
1428
p: nmero de tems.
media aritmtica de los pesos factoriales.
media aritmtica de los cuadrados de los n pesos factoriales.
2
u : media aritmtica de las unicidades de las n variables.
p: nmero de tems.
es el autovalor mayor de la matriz de correlaciones.
978-84-695-8363-0
1429
Mtodo
Participantes
La muestra estuvo compuesta por un total de 8.795 estudiantes de educacin
secundaria del estado de Baja California (Mxico), de entre 12 y 15 aos, pertenecientes a 65
escuelas de los cinco municipios de la entidad. La seleccin de las escuelas fue determinada
mediante el mtodo de muestreo por conglomerados en tres etapas, con probabilidades
proporcionales al tamao, teniendo como unidad ltima de seleccin la escuela y como
unidad de observacin al estudiante. Tras llevar a cabo la fase de depuracin en la que se
eliminaron todos los casos con algn valor perdido, el total de la muestra fue de 7.313
estudiantes, de entre los que 3.770 participantes eran chicas (52,3%) y 3.445 eran chicos
(47,7%).
Instrumento
Partiendo del Cuestionario de Estrategias de Aprendizaje para adolescentes
(Martnez-Guerrero, 2004), el cual consta de 55 tems con seis opciones de respuesta tipo
Lickert y ocho factores. Se realiz una adaptacin aplicando 44 de los 55 tems atendiendo a
los resultados y recomendaciones derivadas de una aplicacin piloto llevada a cabo (Espinoza,
2009). En este caso los tems seguan siendo tipo Lickert, pero tenan cuatro opciones de
respuesta (Siempre o casi siempre, frecuentemente, pocas veces, nunca o casi nunca). Por lo
que una valoracin alta en el cuestionario indicara que el adolescente tiene estrategias de
aprendizaje favorables para su estudio. La escala se redujo a cuatro factores (Planeacin y
organizacin para el estudio, Estrategias cognitivas, Concentracin en el estudio y Motivacin
para el estudio) y los ndices de consistencia interna de nuevo eran aceptables, concretamente
0,89 y para los factores entre 0,79 y 0,85 (Caso, 2009).
Procedimiento
Dado que la aplicacin del presente instrumento se dio en el marco de una estrategia
evaluativa integral ms amplia desarrollada bajo la responsabilidad de la Unidad de
Evaluacin Educativa, se registraron actividades como: el diseo del cuadernillo, capacitacin
del grupo de responsables de la aplicacin de instrumentos, programacin de la aplicacin en
la totalidad de aulas y estudiantes involucrados, aplicacin de instrumentos, procesamiento de
las respuestas. Para la aplicacin de los instrumentos se cont con el apoyo de las autoridades
escolares a fin de convocar a los docentes de las escuelas seleccionadas. La aplicacin de los
cuestionarios estuvo a cargo de personal de la Unidad de Evaluacin Educativa de la UABC y
de estudiantes de psicologa y pedagoga previamente capacitados para ello.
Anlisis de datos
Para el clculo del coeficiente alpha de Cronbach se ha utilizado el programa SPSS,
v.19 mediante el procedimiento normal, es decir a travs del coeficiente de correlacin
Pearson. En cuanto a los coeficientes ordinales, alpha ordinal ha sido estimado sobre la
matriz de correlaciones policricas, utilizando para su estimacin un Anlisis Factorial,
utilizando el procedimiento MRFA (Minimum Rank Factor Analysis), conocido como
anlisis de mnimo factor de rango y rotacin Varimax Dicho anlisis factorial, fue llevado a
cabo con el programa FACTOR, v. 9 y theta ordinal estimado tambin sobre una matriz de
978-84-695-8363-0
1430
Resultados
Para verificar el objetivo marcado, a continuacin se estiman los coeficientes
explicados anteriormente (alpha Cronbach, alpha ordinales y theta ordinal) con la intencin de
demostrar como varan los resultados.
El coeficiente alpha ordinal obtenido toma un valor de 0,931, ndice alto, lo que indica
que la fiabilidad de este instrumento es buena (George y Mallery, 1995).
El coeficiente theta ordinal, ofrece de nuevo un resultado alto, 0,910, por lo que indica
una fiabilidad tambin buena pero este resultado es algo inferior al obtenido con el coeficiente
alpha ordinal.
978-84-695-8363-0
1431
Tambin se puede afirmar que se trata de una fiabilidad alta, dado que el coeficiente
alpha de Cronbach toma el valor de 0,874.
Pero los resultados arrojados demuestran que el comnmente utilizado coeficiente
alpha de Cronbach es el que menor valor ofrece (0,874) y que al tratarse de variables
ordinales los coeficientes de consistencia interna ordinales (apha y theta) no solo resultan los
ms apropiados sino que son los que ofrecen los valores ms altos (alpha: 0,931 y theta:
0,910). En la Tabla 4 se recogen los tres coeficientes a modo de resumen.
Tabla 4
Resumen de los coeficientes de fiabilidad estimados
Alpha Cronbach
0,874
Alpha ordinal
0,931
Theta ordinal
0,910
Discusin y Conclusiones
La conclusin a la que nos lleva este estudio es la necesidad de utilizar otros
coeficientes de fiabilidad acordes a las caractersticas de las variables que conforman el
instrumento. Como se ha podido comprobar en este estudio y en otros (Gadermann, Guhn,
y Zumbo, 2012; Elosua y Zumbo, 2008), la fiabilidad es mayor cuando utilizamos los
coeficientes adecuados (ordinales, dado que las variables que conforman el instrumento son
tipo Likert). Utilizando el coeficiente alpha de Cronbach se obtiene un ndice de fiabilidad del
0,874; mientras que los coeficientes ordinales alpha y theta ofrecen valores de 0,931 y 0,910
respectivamente. Es decir, no solo resultan los valores de los coeficientes ordinales los ms
apropiados sino que son los que ofrecen los valores ms altos. Lo que es evidente, es que con
variables ordinales lo apropiado es utilizar coeficientes ordinales, si bien es cierto que no se
debe utilizar cualquier coeficiente ya que depender del objetivo establecido.
Es lcito sealar algunas limitaciones al respecto, principalmente provocadas por la
correlacin policrica. Esta correlacin es una estimacin del grado de relacin lineal entre
dos variables continuas latentes a dos variables ordinales (Jreskog y Moustaki, 2001 citado
en Jreskog, 1994). Estas correlaciones, como as indican Elosua y Zumbo (2008) no asumen
la distribucin normal multivariante de las variables, tanto observadas como latentes; adems
de la posibilidad de ofrecer matrices matemticamente intratables lo que imposibilita el
anlisis factorial. A pesar de ello, y de cara a futuras lneas de investigacin, es relevante
considerar otros coeficientes de fiabilidad que nos permitan ampliar el estudio comparativo,
como los coeficientes omega (McDonald, 1999), glb (Bentler y Woodward, 1980), beta
(Revelle, 1979); adems de abarcar la multidimensionalidad del instrumento, ya que esta
escala se conforma de cuatro factores (planeacin y organizacin para el estudio, estrategias
cognitivas, concentracin en el estudio y motivacin hacia el estudio) que se deben estudiar
de manera profunda y como dimensiones independientes de cara a futuros trabajos.
Referencias
Armor, D. J. (1974). Theta reliability and factor scaling. En H. Costner (Ed.), Sociological
methodology (pp. 17-50). San Francisco: Jossey-Bass.
Bentler, P., y Woodward, J. (1980). Inequalities among lower bounds to reliability: With
applications to test construction and factor analysis. Psychometrika, 45(2), 249-267.
978-84-695-8363-0
1432
Elosua, P., Zumbo, B. (2008). Coeficiente de fiabilidad para escalas de respuesta categrica
ordenada.
Psicothema,
20(4),
896-901.
Disponible
en:
<http://www.psicothema.com/pdf/3572.pdf>
Fabrigar, L. R., Wegener, D. T., MacCallum, R. C., y Strahan, E. J. (1999). Evaluating the use
of exploratory factor analysis in psychological research. Psychological Methods, 4,
272-299.
Flora, D.B., y Curran, P.J. (2004). An empirical evaluation of alternative methods of
estimation for confirmatory factor analysis with ordinal data. Psychological Methods,
9, 466-491. Disponible en <http://www.statmodel.com/download/floracurran.pdf>
Gadermann, A. M., Guhn, M. y Zumbo, B. D. (2012). Estimating ordinal reliability for
Likert-type and ordinal item response data: A conceptual, empirical, and practical
guide. Practical Assessment, Research & Evaluation, 1(3), 1-13. Disponible en
<http://pareonline.net/pdf/v17n3.pdf>
George, D., y Mallery, P. (1995). SPSS/PC+ step by step: A simple guide and reference.
Belmont, CA: Wadsworth Publishing Company.
Henson R K. (2001). Understanding internal consistency reliability estimates: A conceptual
primer on coefficient alpha. Measurement and Evaluation in Counseling and
Development, 34, 177-189.
Johnson, D. E. (1998). Mtodos multivariados aplicados al anlisis de datos. Mxico:
International Thomson Editores.
Jreskog, K.G. y Moustaki, I. (2001). Factor analysis of ordinal variables: A comparison of
three approaches. Multivariate Behavioral Research, 36(3), 347-387. Disponible en
<http://dx.doi.org/10.1207/S15327906347-387 >
Martnez-Guerrero, J. I. (2004). La medida de estrategias de aprendizaje en estudiantes
universitarios. (Tesis doctoral). Universidad Complutense de Madrid, Espaa.
McDonald, R.P. (1985). Factor analysis and related methods. Hillsdale, NJ: Erlbaum.
978-84-695-8363-0
1433
McDonald, R.P. (1999). Test theory. A unified treatment. Mahwah, NJ: Lawrence Erlbaum
Associates.
Morales Vallejo, P. (2007). Estadstica aplicada a las ciencias sociales. La fiabilidad de los
tests y escalas. Madrid: Universidad Pontificia Comillas. Disponible en
<http://www.upcomillas.es/personal/peter/estadisticabasica/Fiabilidad.pdf>
Osburn, H. G. (2000). Coefficient alpha and related internal consistency reliability
coefficients. Psychological Methods, 5, 343-355.
Revelle, W. (1979). Hierarchical cluster-analysis and the internal structure of tests.
Multivariate Behavioral Research, 14(1), 57-74.
Sijtsma, K. (2009). On the use, the misuse, and the very limited usefulness of Cronbachs
alpha. Psychometrika, 74, 107- 120.
Streiner DL. (2003). Being inconsistent about consistency: When coefficient alpha does and
doesnt matter. Journal of Personality Assessment, 80, 217-222.
Zumbo, B.D., Gadermann, A.M., y Zeisser, C. (2007). Ordinal versions of coefficients alpha
and theta for likert rating scales. Journal of Modern Applied Statistical Methods, 6, 2129.
978-84-695-8363-0
1434
Resumen
En esta comunicacin presentamos los resultados de un proyecto centrado en disear y
validar un instrumento para valorar la percepcin de los trabajadores y trabajadoras de la
Universitat de Valncia (UVEG), en lo referente a la conciliacin vida laboral, familiar y
personal. Para la validacin del instrumento se ha realizado un estudio piloto donde se ha
recogido la percepcin de 487 hombres y mujeres de PDI y PAS. Como metodologa de
anlisis se ha llevado a cabo un proceso de investigacin dirigido a aportar evidencias de
validacin del instrumento construido. A travs del anlisis de fiabilidad de los tems (Alfa de
Cronbach) y de la dimensionalidad del instrumento (Anlisis de Componentes Principales).
En conclusin se presenta, atendiendo a los resultados obtenidos en los anlisis realizados,
una propuesta de escala para valorar la percepcin de hombres y mujeres respecto a la
conciliacin vida laboral, familiar y personal. Asimismo, consideramos que el diseo de este
instrumento supone un elemento de diagnstico relevante para conocer la realidad de
implantacin, desarrollo y percepcin de las medidas institucionales que facilitan la
conciliacin de las personas que trabajan en la Universidad.
978-84-695-8363-0
1435
Introduccin
Todava hoy en da, el gnero convierte al mbito laboral en contextos diferentes para
hombres y mujeres. Incorporar la perspectiva de gnero al estudio de la conciliacin de la
vida laboral y familiar de los trabajadores/as de una institucin como la Universitat de
Valncia implica entender las desigualdades y las diferencias partiendo del anlisis de las
relaciones y percepciones que se generan entre los hombres y las mujeres, as como de las
consecuencias que estas producen. Desde nuestra perspectiva la conciliacin es hacer
compatible tener familia y tener trabajo para ambos sexos. As, los trabajadores y trabajadoras
universitarias pueden conciliar porque comparten los espacios y los tiempos, especialmente
los familiares, que implican atencin a hijos/as o a mayores, desde la corresponsabilidad, por
lo que las medidas de conciliacin desarrolladas en esta institucin deben adecuarse a las
necesidades de hombres y mujeres para que puedan asumir, en condiciones equitativas, el
trabajo domstico y de cuidados y el laboral (Bustelo y Lombardo, 2007).
Comenzamos este estudio entendiendo que la conciliacin como un conjunto de
acciones sociales, institucionales y empresariales cuyo objetivo es el desarrollo de una
sociedad ms igualitaria y justa. Es un modo de organizar el entorno laboral que facilita a
hombres y mujeres la realizacin del trabajo y la sancin de sus responsabilidades personales
y familiares (Martn, 2009). Estos han sido algunos de los motivos que nos han hecho
considerar como fundamentales los estudios o investigaciones que convierten en su foco de
anlisis la visin y percepcin de los trabajadores/as acerca de sus trabajos, de los sistemas de
apoyo que se ponen al servicio de la conciliacin, de los sistemas de apoyo para la familia, y
de los nuevos sistemas y modelos de horarios laborales (Casado y Gmez, 2006; Guirao,
2010).
Mtodo
Objetivo
El objetivo principal de esta comunicacin es presentar el proceso de validacin de un
instrumento de recogida de informacin destinado a valorar la percepcin subjetiva de
hombres y mujeres sobre las acciones y distribuciones de la vida familiar y laboral y su visin
acerca de la interaccin de ambos elementos; y las percepciones de los trabajadores/as de la
Universitat de Valncia (UVEG) desde el constructo de conflicto como mecanismo de
relacin entre trabajo y familia.
Participantes
Para la validacin del instrumento se ha utilizado la percepcin de 487 trabajadores y
trabajadoras que conforman el cuerpo de PDI y PASde la Universitat de Valncia (UVEG), a
travs de un muestreo no probabilstico por accesibilidad. Con edades comprendidas entre 24
y 70 aos, siendo la media de edad de 46,9 aos, y donde un 38,6% son hombres y un 61,4%
mujeres.
978-84-695-8363-0
1436
Instrumento
A partir de la revisin de distintas tcnicas evaluativas, instrumentos y escalas de
medicin y valoracin que bien directa o indirectamente miden o valoran la conciliacin vida
laboral y familiar segn hombres y mujeres, se extraen los tems significativos y relevantes
para la elaboracin del cuestionario piloto. De esta forma se disea un cuestionario ad hoc
conformado por 72 tems, la mayora con una escala de valoracin del 1 al 5 (de Nada /
Totalmente en desacuerdo a 5 Siempre / Totalmente de acuerdo) para recoger la percepcin
de los trabajadores y trabajadoras de la UVEG, desde una aplicacin online. Para su difusin
se utilizaron como canales el correo electrnico de los jefes de seccin de los distintos
servicios de la universitat, de la secretaria/o de los equipos directivos de los distintos centros.
Las encuestas online permanecieron abiertas durante dos meses, de abril a junio de 2012,
periodo en el que se realiz la recogida de informacin.
Resultados
La estrategia de anlisis seguida ha sido dinmica, es decir, los anlisis realizados se
han ajustado a las caractersticas de las distribuciones empricas de las variables, y de los
resultados obtenidos. Todos los anlisis se han ejecutado con el Paquete estadstico SPSS v.
19 y con el Excel, bajo la licencia de la Universitat de Valncia. Tras el anlisis descriptivo
del cuestionario a travs del cual se ha podido conocer la percepcin que tanto los
trabajadores como las trabajadoras de la UVEG tienen en general de la conciliacin vida
familiar, laboral y personal, se desarrolla el anlisis de consistencia interna y seleccin de
elementos. Para este fin y dentro de los diferentes procedimientos que la Teora Clsica de los
Test (TCT) nos ofrece el clculo del coeficiente de fiabilidad - basados en el coeficiente de
correlacin de Pearson-, en este estudio se ha optado por el de Alfa de Cronbach.
Concretamente, se realiza el anlisis de consistencia interna de la escala de conciliacin vida
laboral, familiar y personal sobre 51 de los 72 tems incluidos en el cuestionario inicial y
sobre 487 casos. Concretamente, se han omitido de este anlisis los 13 tems iniciales
categricos y de identificacin y las preguntas abiertas del cuestionario (tems 26, 41, 53,
72).As, la realizacin de este anlisis proporciona la informacin que se necesita para
observar el comportamiento del cuestionario en su conjunto y tambin el comportamiento de
cada uno de los tems. Adems de la fiabilidad total de la escala se calculan los estadsticos de
fiabilidad para los elementos que la componen, con la finalidad de analizar el poder de
discriminacin de cada uno de ellos y poder realizar una seleccin de los mismos. Para ello,
se observ la correlacin elemento-total corregido, de manera que se identificaron los tems
irrelevantes, prefirindose los tems que manifiesten una alta correlacin con la escala. Por
otro lado, se examina el indicador alfa de Cronbach si se elimina el elemento que nos
permite ver la aportacin del tem a la fiabilidad de la escala. Los criterios establecidos fueron
eliminar los inferiores a 0.20 o negativos, revisar aquellos que estn entre 0.20 y 0.40 y
mantener los superiores a 0.40. Respecto al alfa de Cronbach si se elimina el elemento se
eliminan aquellos tems que no mejoren la fiabilidad de la escala analizada si se elimina el
tem. As, constatamos que la prueba en su conjunto presenta una fiabilidad medio-alta (alfa=
.708).Sealar as que desde este anlisis el cuestionario debera verse modificado para poder
mantener o aumentar su fiabilidad, eliminando 10 de los tems que lo componen (tems 20,
21, 32, 37, 40, 57, 63, 66, 69 y 70) y revisando tres (36, 55 y 67), si volviese a ser
administrado -ver Tabla 1-.
978-84-695-8363-0
1437
Tabla 1
Estadsticos Total-elemento
Varianza
Media de
de la
la escala si escala si se
se elimina
elimina el
el elemento elemento
Correlaci
n elementototal
corregida
Alfa de
Cronbach
si se
elimina el
elemento
151,62
222,132
,227
,702
152,00
223,105
,222
,702
150,54
229,830
-,024
,714
150,26
227,353
,063
,709
150,75
222,917
,182
,704
150,12
222,209
,222
,702
150,26
219,943
,265
,700
150,57
222,461
,161
,705
150,33
221,852
,190
,703
150,97
223,437
,123
,707
149,95
221,650
,219
,702
150,05
221,934
,195
,703
149,71
224,763
,150
,705
151,37
151,41
149,74
149,53
151,58
152,05
150,20
151,07
227,071
221,064
220,441
221,550
224,872
229,016
222,752
221,923
,045
,168
,316
,300
,104
,000
,182
,186
,711
,705
,698
,699
,708
,713
,704
,703
151,78
226,727
,068
,709
151,85
215,693
,267
,698
150,67
150,89
209,489
212,013
,339
,337
,693
,694
152,13
219,290
,303
,698
152,59
223,261
,229
,702
152,70
222,700
,302
,700
152,81
225,436
,283
,703
151,57
216,829
,243
,700
152,17
220,917
,201
,703
978-84-695-8363-0
1438
150,69
217,560
,222
,702
151,14
218,653
,223
,701
150,64
223,009
,168
,704
151,10
226,365
,091
,708
150,84
223,631
,148
,705
151,39
229,126
,008
,711
149,83
221,587
,355
,699
150,51
218,680
,358
,696
150,17
220,333
,324
,698
150,38
221,758
,259
,701
150,89
223,782
,209
,703
150,84
227,018
,067
,709
150,12
223,082
,247
,702
150,00
223,711
,237
,702
152,03
232,454
-,094
,717
151,04
225,232
,099
,708
149,73
225,524
,133
,706
150,72
227,034
,059
,710
150,51
227,226
,047
,710
149,93
222,028
,246
,701
978-84-695-8363-0
1439
978-84-695-8363-0
1440
- El quinto factor, servicios para la atencin a hijos/as y otros familiares, el cual explica el
5.00% de la varianza total, lo que supone un 7.36% de la varianza explicada en el espacio
n-factorial. En cuanto al contenido del factor vemos como en l se incluyen tems que
tienen relacin con los servicios de atencin a personas dependientes como los hijos/as,
nuestros familiares de avanzada edad, personas con discapacidad que necesitan de
cuidados permanentes.
- Un sexto factor denominado, contratacin de personas para el cuidado de los hijos/as y el
hogar, explica el 4.73% de la varianza total, lo que supone un 6.96% de la varianza
explicada en el espacio n-factorial. En cuanto a su contenido vemos como en l se incluyen
tems que tienen que ver con la necesidad de contratar a personas para el cuidado de
nuestros hijos/as y/o personas mayores y el bienestar familiar y personal.
- Un sptimo factor, conocimiento de la legislacin sobre conciliacin, explicando el 3.74%
de la varianza total, lo que supone un 5.50% de la varianza explicada en el espacio nfactorial. En l se incluyen tems relacionados con el conocimiento de la legislacin en
materia de conciliacin y la percepcin ante el trabajar en casa o fuera de ella.
- El resto de factores que incluyen aspectos que ayudan a un spillover / desbordamiento
positivo o negativo son presentados en conjunto dada su aportacin en cuanto a la varianza
explicada en el espacio n-factorial como el nmero de tems que los determinan. As, decir
que sus aportaciones van desde un 4.92% -octavo factor- a un 2.93% del factor diecisis-.
En cuanto al contenido de estos factores que se analizan de forma conjunta, vemos como
en l se incluyen tems que se relacionan con aspectos que tienen que ver con el calendario,
las vacaciones, la reduccin y flexibilidad laboral, preocupacin por el trabajo,
competencias familiares y responsabilidad laboral.
Conclusin
En conclusin se plantea, atendiendo a los resultados obtenidos en los anlisis
realizados (fiabilidad dimensionalidad), la propuesta siguiente de escala para valorar la
percepcin de hombres y mujeres respecto a la conciliacin vida laboral, familiar y personal,
segn tems y dimensiones -ver Tabla 2-. Sealar que estos tems se podran presentar
acompaados de una escala de valoracin del 1 al 5 (donde 1 es Totalmente en desacuerdo y 5
Totalmente de acuerdo).
Tabla 2
Dimensiones e tems Escala resultante percepcin de hombres y mujeres respecto a la conciliacin
vida laboral y familiar
tem 27
tem 28
tem 29
tem 30
tem 31
tem 54
tem 56
tem 60
978-84-695-8363-0
1441
978-84-695-8363-0
1442
Referencias
Bustelo, M. y Lombardo, E. (Eds.) (2007). Polticas de Igualdad en Espaa y en Europa.
Afinando la mirada. Madrid: Ctedra.
Casado, E. y Gmez, C. (2006). Los desafos de la conciliacin de la vida familiar y
profesional en el siglo XXI. Madrid: Biblioteca Nueva.
Guirao Mirn, C. (2010). La construccin social del problema de la conciliacin vida
familiar y laboral en Espaa, 1999 a 2009. (Tesis Doctoral). Universidad de Alicante,
Alicante.
Martin, M. P. (2009). La cuestin de la conciliacin en Espaa. En C. Martnez (Coord.),
Gnero y conciliacin de la vida familiar y laboral. Murcia: Ediciones Universidad de
Murcia.
978-84-695-8363-0
1443
Resumen
El objetivo de esta investigacin es la validacin del constructocalidad relacional
percibida por mujeres de zonas rurales en las redes sociales online. Para ello, abordamos
la medida de la calidad relacional percibidaincorporando una nueva dimensin: las
interacciones de regulacin, a las consideradas en estudios previos como la confianza, la
satisfaccin y el compromiso. El diseo correlacional se basa en un estudio tipo survey
apoyado en entrevistas personales a 478 mujeres de la provincia de Sevilla. Las respuestas se
recogen en escalas tipo Likert (0-4). El anlisis de datos combina tcnicas exploratorias y
confirmatorias usando SPSS (v. 18) y SmartPLS 2.0. Obtenemos un modelo de ecuaciones
estructurales que confirma las hiptesis de relaciones entre las dimensiones establecidas, con
altos indicadores de fiabilidad y validez. Los resultados obtenidos nos permiten planificar y
tomar decisiones que inciden en una mejora de sus interacciones en las redes sociales online.
Descriptores: Calidad relacional percibida, Gnero y TIC, Mujer rural, Redes sociales, PLS
(Partial Least Squares).
Abstract
The focus of our research is the perceived relationship quality by women. Within this, we try
to solve a problem of measuring the quality of the relationship, while we hope to link a new
dimension to the measurement process. This is a correlational study, based on interviews
"face to face". Their responses are recorded using Likert scales (0-4). There have been 478
women interviewed of the province of Seville. For data analysis we used SPSS and also
combine exploratory and confirmatory analytical techniques, using SmartPLS 2.0.As the
study results we obtain a structural equation model confirms the hypothetical set of
relationships between the 4 dimensions. Also, we obtained high indicators of reliability and
validity for the measurement model. The results obtained allow us to develop plans and make
decisions on how to support women in rural areas to conduct a more profitable use of their
interactions in social networks.
Keywords: Relational perceived quality, gender and ITC, Rural woman, Social networks,
PLS (Partial Least Squares).
978-84-695-8363-0
1444
Introduccin
Las redes sociales online se convierten en comunidades especializadasque resultan
claves para la construccin y reconstruccin de modelos de interaccin. Las mujeres rurales
junto al colectivo juvenil son colectivos clave para los procesos de desarrollo social equitativo
que superen la brecha digital siendo relevantes la alfabetizacin y capacitacin digital.
El estudio de la calidad relacional de las mujeres rurales en las redes
socialescontribuye a la calidad percibida, y por tanto, puede ser un factor facilitador de las
relaciones a largo plazo y de la inclusin digital de las mujeres. En el tema relacional,
partimos de la existencia de cierta insatisfaccin en el tono y tipo de interacciones que se
producen en las redes sociales online. En concreto, deseamos saber ms y comprender cmo
ayudar a las mujeres para que puedan establecer, relaciones online de calidad que faciliten y
favorezcan sus vidas y no las alejen de las tecnologas.
El anlisis de la accin comunicativa en las redes es una prioridad en s,
preocupndonos por la calidad de las relaciones. Por ello, analizamos la calidad
relacionalque las mujeres perciben en el uso de las redes sociales. La Calidad Relacional es
un constructo procedente del Marketing que alude a que la calidad percibida por el cliente (en
nuestro caso la usuaria de las redes) est determinada, en gran medida, por la forma en que las
personas de una organizacin manejan las relaciones con dichos clientes. Nuestro objetivo es
abordar terica y empricamente el constructocalidad relacional percibida, aportando un
modelo de ecuaciones y reflexiones sobre las relaciones online de las mujeres en las redes
sociales. Tericamente, el estudio se sustenta en dos paradigmas:
1) La primera vertiente se sustenta en el Marketing y la Publicidad Empresarial
interesada en la lealtad y compromiso de los clientes de servicios de internet. Ello supone
un punto de partida analtico de un tipo de calidad relacional que propicia el mantenimiento o,
en su defecto, el abandono de un servicio por parte de las personas que lo usan. Nuestro
fundamento son los estudios precedentes de Snchez-Franco (2010) acerca del efecto
moderador de la calidad afectiva percibida (Zhang, Li y Sun, 2006) en la aceptacin de TIC,
apoyados en el modelo TAM -TechnologyAcceptanceModel- (Davis, Bagozzi y Warshaw,
1992) y aplicados al estudio del valor otorgado por los usuarios a determinados servicios de
Internet (Snchez, Martn y Rondn, 2010); el enfoque que tambin se sustenta en estudios
previos (Garbarino y Johnson, 1999; Vzquez et al., 2002) que vinculan la medida de la
calidad relacional percibida con tems que suponen un reflejo del constructo medido segn
dimensiones resultantes y consecuentes con la experiencia relacional vivenciada (en nuestro
caso, mujeres rurales en las redes sociales). Las dimensiones fundamentales de esta primera
va para la medida son satisfaccin, confianza (Crosby, Evans y Cowles, 1990) y
compromiso (Morgan y Hunt, 1994) de las mujeres en las redes, que suponen ya un claro
indicativo externo de la calidad relacional.
2) De otro lado est la tradicin pedaggica, preocupada por la calidad relacional en el
contexto de relaciones asimtricas entre profesorado y alumnado, y en relaciones entre iguales
que cooperan para desarrollar sus competencias. Esta segunda va se ha interesado por la
calidad de las interacciones a la luz de la finalidad de las acciones comunicativas. Se centra en
el aspecto procesual, por lo que hemos aplicado un conjunto de tems que configuran la
dimensin regulacin intersubjetiva percibida, utilizada en anteriores investigaciones sobre
la interaccin cara a cara y online en procesos sociales y educativos. Se basa en las tesis
vygotskianas del enfoque sociocultural, siendo destacables los estudios realizados sobre
978-84-695-8363-0
1445
978-84-695-8363-0
1446
H22: +
H31: +
Satisfaccin
Compromiso
H23: +
H32: +
H21: +
Confianza
978-84-695-8363-0
1447
sentido dialgico. Esta otra dimensin, que denominamos Interacciones de regulacin est
compuesta de tems expresivos del tipo de regulacin percibida en las redes: control,
orientacin, afecto, consulta, verificacin, seguimiento y autorregulacin. Estos tems ponen
de manifiesto las interacciones reguladoras online con las otras personas de la red, segn sean
estas: regulaciones externas (tems 7, 8 y 9), regulaciones conjuntas (tems 10, 11 y 12), o
acciones discursivas auto-reguladas (tem 13). Finalmente aadimos una escala resumen en
referencia global al constructo (tem 14). Vase en la Tabla 1 el instrumento final utilizado
para la recogida de datos:
Tabla 1
tems utilizados para la medida de la Calidad Relacional Percibida en las Redes Sociales
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
8.
9.
10.
11.
12.
13.
14.
0
0
0
1
1
1
2
2
2
3
3
3
4
4
4
0
0
0
0
1
1
1
1
2
2
2
2
3
3
3
3
4
4
4
4
978-84-695-8363-0
1448
Tabla 2
Indicadores del Modelo de Medidas
Dime nsiones e tems
Cargas
Confianza
tem01
tem02
0.906***
0.879***
tem03
tem04
0.903***
0.919***
Fiabilidad
compuesta
0.887
t-estadstico
(bootstrap)
0.797
74.487
44.572
0.907
Satisfaccin
AVE
0.830
80.673
109.257
0.879
0.784
tem05
0.885***
68.122
tem06
0,886***
65.103
Regulaciones de Interaccin
0.912
0.594
tem07
0.769***
31.165
tem08
0.744***
23.284
tem09
0.801***
44.028
tem10
0.751***
25.725
tem11
0.834***
46.698
tem12
0.823***
43.263
tem13
0.662***
19.082
*** todas las cargas se muestran significativas p < 0.001 (basado en t(499), two-tailed test), dado que los valores t
superan ampliamente el valor crtico para t(0.001: 499) = 3.310124157.
Compromiso
En definitiva, parece aconsejable aceptar la hiptesis H11 sobre idoneidad del modelo
de medida para estudiar las relaciones estructurales entre las variables latentes.
978-84-695-8363-0
1449
Hiptesis
En relacin al valor global del modelo (H12) se aplica el test de Stone-Geisser (Q2), un
valor que ha de ser superior a 0 cuando el modelo ofrece una relevancia predictiva
satisfactoria, nuestros resultados son: Q2I.Regulacin = 0.466; Q2Compromiso = 0.449; Q2Satisfaccin =
0.373; Q2Confianza = 0.173. La varianza explicada (R) por las variables endgenas debe ser
superior a 0.1 para poder apoyar las hiptesis, siendo en este estudio: R2Compromiso = 0.580;
R2Satisfaccin = 0.456; R2Confianza = 0.257. Finalmente, el producto de los coeficientes path ()
con la correlacin entre constructos tambin obtienen valores adecuados, por lo que
interpretamos que el modelo estructural es til.
Discusin y conclusiones
Una aplicacin inmediata de este trabajo es la utilizacin del modelo presentado para
proporcionar a los profesionales de la educacin una explicacin cientfica de la calidad
relacional percibida, enmarcada en una de las teoras educativas ms difundidas, aceptadas y
de gran valor educativo, como es la teora sociocultural, como una de las lneas tericas
principales del estudio. Este trabajo pone en valor el efecto de las interacciones de regulacin
en la calidad relacional percibida por las mujeres rurales en las redes sociales. Existe cierta
controversia con respecto a la interrelacin entre las tres variables principales componentes de
la calidad relacional: satisfaccin, compromiso y confianza. Autores como Woo y Ennew
(2004), en su estudio sobre la relacin entre vendedores y proveedores, sostienen que la
confianza y el compromiso son los determinantes de la calidad. En nuestro trabajo, las
interacciones de regulacin como dimensin novedosa y clave para la formacin de las
mujeres influyen positivamente en la satisfaccin y en el compromiso, pero no influyen en la
confianza en las redes. En el mismo sentido, se observa en nuestro trabajo que otra de las
hiptesis fallidas hace referencia a la influencia de la confianza sobre el compromiso
adquirido en las redes sociales online. Y es que, existe en la literatura cientfica debates
encontrados con respecto a la interrelacin entre las tres variables componentes de la calidad
relacional. As, mientras diversos investigadores proponen una influencia directa positiva de
la confianza sobre el compromiso afectivo (Garbarino y Johnson, 1999; Gouranis, 2005),
otros proponen una relacin inversa, presentando al compromiso como generador de la
978-84-695-8363-0
1450
confianza. En nuestro estudio, ello puede explicarse por diferencias perceptivas de las
usuarias, al basarse los antecedentes en una idea de calidad relacional asociada a otros
servicios de Internet (con diferentes propiedades comunicativas, interactivas y expresivas), as
como por las diferencias muestrales dado que en nuestro estudio slo participan mujeres de
zonas rurales que usan redes sociales, constituyendo una muestra muy caracterstica y
particular. Por otro lado, es posible que sea un efecto que se produce por la introduccin del
nuevo constructo al ampliar el juego de ecuaciones de regresin, lo que slo podremos
comprobar en sucesivas mediciones considerando tambin la relacin inversa.Con respecto a
la satisfaccin es considerada un concepto de la calidad relacional (BruningyLedingham,
1999). Sin embargo, Pereira (2011) considera que no es lo suficientemente operativo para la
medicin de la calidad percibida, ya que no explica ni qu determina la satisfaccin ni cul es
el modo de relacin que la maximiza.
En definitiva, podemos concluir que la utilidad del modelo de ecuaciones estructurales
en la investigacin educativa radica en la aportacin de una visin global de los aspectos
implicados en la medida de la calidad relacional percibida, en comparacin con otro tipo de
tcnicas estadsticas que se centran en el anlisis individual de cada factor. El modelo presenta
bondad de ajuste y aporta una reestructuracin del constructo calidad relacional percibida
en funcin a la incorporacin de una nueva dimensin como las interacciones de regulacin.
Utilizando este modelo explicativo de la calidad relacional percibida basado en la
teora sociocultural, se pueden realizar intervenciones educativas que tengan en cuenta en su
diseo la influencia de las interacciones comunicativas online en la percepcin de la calidad
relacionalde las mujeres y por tanto, fomenten prcticas educativas que redunden en la mejora
de las relaciones y en la permanencia de las mujeres en las redes sociales. Procesos
formativos, en definitiva,que eviten que se conviertan en un colectivo en riesgo de exclusin
unido al gnero y a la ruralidad. Con el modelo presentado como marco para explicar la
calidad relacional se puede resaltar que cada persona que participa en la red social es parte
activa de las acciones comunicativas de las mujeres pudiendo segn la orientacin de la
interaccin mantenida con otros/as cambiar la propia percepcin sobre la calidad de las
relaciones que mantienen en este tipo de espacios. Esto potencialmente puede tener
repercusiones en el carcter de la brecha digital.Quedan por explorar nuevas variables
moderadoras como la edad, la situacin laboral etc. que nos arrojen ms luz al modelo de
medida y permitan predecir la calidad relacional de las mujeres rurales en las redes sociales.
Referencias
Brown, A.L. y Palincsar, A.S. (1989). Guided, cooperative learning and individual knowledge
adquisition. En L.B. Resnick (Ed.), Knowing, learning and instruction (pp. 393-452).
NJ, Hillsdale: LEA.
Bruning, S. y Ledingham, J. (1999). Relationship between organizations and public:
Development of a multi-dimension organization-public relationship scale. Public
Relation Review, 25, 157-170.
Crosby, L.A., Evans K.R. y Cowles, D. (1990). Relationship quality in services selling: An
interpersonal influence perspective. Journal of Marketing, 54(3), 68-81.
978-84-695-8363-0
1451
978-84-695-8363-0
1452
Zhang, P., Li, N. y Sun, H. (2006, January). Affective quality and cognitive absorption:
Extending Technology Acceptance Research. Proceedings of the Hawaii International
Conference on System Sciences: IEEE Computer Society. Disponible en
<http://melody.syr.edu/pzhang/publications/HICSS_06_Zhang_Li_Sun_PAQ_CA_TA
M.pdf>
978-84-695-8363-0
1453
Resumen
Se presenta el cuestionario de Estilos de Interaccin en Atencin Temprana (EIAT) en sus
versiones para familias y profesionales de Atencin Temprana (AT). Su desarrollo es
resultado del trabajo con Grupos Focales de discusin (15 profesionales y 13 familiares de
nios con necesidades de AT), y de un riguroso juicio de expertos (6 profesionales de AT en
ejercicio, 5 expertos en orientacin y 6 familiares de nios que reciben AT). Los
cuestionarios valoran diferentes aspectos sobre prcticas de intercambio de informacin,
dificultades percibidas para la puesta en marcha de las orientaciones realizadas, y estilos de
relacin del terapeuta de Atencin temprana en su interaccin con la familia, todo ello a
travs de un conjunto de tems con una escala tipo Likert (41 para la versin de los
Cuidadores principales y 42 en la versin de los profesionales de AT).
Introduccin
Actualmente en Atencin Temprana (AT), atendiendo a la influencia de la teora
ecolgica y la teora sistmica (Bronfenbrener, 1995; Mendieta, 2005; Turnbull, 2007), la
familia se entiende como el eje principal del proceso de desarrollo infantil, el entorno ms
978-84-695-8363-0
1454
inmediato al nio y mediadora ante los dems entornos sociales y educativos en los que se
desenvuelve el nio. Por ello la intervencin no debe quedar relegada solo a la estimulacin
del nio, sino que se debe encaminar tambin a la generacin de entornos competentes
(Perpin, 2009), entre los que la familia ser uno fundamental.
Desde distintos marcos se aboga por un modelo en el que la familia acte de forma
complementaria al profesional (De Linares y Rodrguez, 2004), en el que se acepten y
respeten los diferentes roles que debe desarrollar, reconocindoles un papel de agente activo
de AT (Garca-Snchez, 2002). As el profesional se convierte en un elicitador de cambios o
generador de entornos competentes (Perpin, 2009). Bajo este planteamiento, emerge una
doble va de actuacin: relacional y prctica (Dunst, 2005; Wilson & Dunst, 2005),
fundamentada en una intervencin flexible, sensible a las preocupaciones de las familias, en la
que prima la escucha activa, empata, creencia en la capacidad y competencia de las familias,
etc.
Los enfoques de trabajo favorables o amigables a la familia (que no necesariamente
centrados de forma exclusiva en ella), buscan que el profesional colabore en la identificacin
de fortalezas, apoyos y recursos, respetando la diversidad y los valores familiares,
fomentando su competencia en la toma de decisiones familiares, buscando que la
comunicacin sea abierta, fluida y colaborativa (Bayley, Raspa y Fox, 2012; Bayley, Raspa,
Humphreys y Sam, 2011).
Para conseguir estos objetivos se hace necesario que la familia entienda y siga las
orientaciones ofertadas por el profesional. Todo ello dentro de una interaccin que ha de ser
dinmica y fluida, basada en la bsqueda de mejoras en las situaciones familiares y
personales de sus miembros y en el intento de hacerles crecer como padres competentes y
como personas (que no como terapeutas).
Mendieta (2005), seala factores que pueden condicionar la adhesin de la familia a
las orientaciones recibidas, como una adecuada comunicacin, no nicamente fundamentada
en la transmisin verbal del diagnstico sino, adems y de forma ineludible, en el
establecimiento de un vnculo que propicie una interaccin significativa. Por su parte, Wilson
y Dunst (2005) ponen de manifiesto la necesidad de que el profesional de AT construya una
relacin de comunicacin clida y cariosa, en la que prime una escucha activa y reflexiva.
En trabajos previos delimitamos algunos factores que contribuyen a mejorar o limitan
la adhesin al seguimiento de las orientaciones y recomendaciones sugeridas por el terapeuta.
Encontramos que los familiares aprecian especialmente el establecimiento de una
comunicacin fluida, siendo ste uno de los factores mejor valorado, junto con la importancia
atribuida a la competencia paterna y el estilo de la informacin recibida (oral o escrito)
(Escorcia, Snchez-Lpez y Garca-Snchez, 2012). Conscientes de la trascendencia de la
implicacin de la familia para el xito de la intervencin y generalizacin de las orientaciones
en el entorno natural del nio, trazamos un perfil de actuaciones y prcticas que pueden
favorecer el seguimiento y adhesin de la familia a las recomendaciones prescritas por el
terapeuta (Escorcia, Orcajada, Snchez-Lpez y Garca-Snchez, 2012).
De acuerdo con todo ello, se hace evidente la necesidad de conocer y estudiar los
estilos de interaccin que se estn llevando a cabo en AT entre profesionales y familias, con el
fin de poder analizar fortalezas y debilidades y, a partir de ellas, realizar las oportunas
propuestas de mejora. Con tal fin, hemos desarrollado un cuestionario sobre Estilos de
978-84-695-8363-0
1455
Interaccin en Atencin Temprana (EIAT). Han sido diseadas dos versiones, una destinada a
los profesionales de AT y otra dirigida a los cuidadores de nios que reciben tratamiento en
centros de AT. En este trabajo presentamos los resultados de la revisin por expertos
realizada sobre el instrumento inicialmente desarrollado.
Mtodo
Sujetos
Se solicit la colaboracin de 11 profesionales expertos relacionados con AT (6
psiclogas que trabajan en AT, con experiencia laboral media de 23 aos) o en el campo de la
orientacin (5 pedagogas-orientadoras, con experiencia laboral media de 22 aos), para que
llevaran a cabo la valoracin de los tems del cuestionario en sus dos versiones. Y en el caso
del cuestionario dedicado al cuidador principal se cont tambin con la valoracin del
instrumento realizada por 5 familiares de nios con necesidades de AT.
Procedimiento
A todos los participantes en el proceso de juicio por expertos se les solicit que
valorasen cada tem, en una escala de 1 a 5, en funcin de su grado de claridad (redaccin,
presencia de posibles ambigedades, sesgos gramaticales) y representatividad en relacin a
la dimensin a la que estaba asignado. El grupo de profesionales valor las dos versiones del
cuestionario, mientras que el de familiares valor slo los tems del cuestionario diseado
para cuidadores principales. Adems, los jueces podan anotar consideraciones para mejorar el
instrumento o aclaraciones a sus valoraciones y si consideraban conveniente la inclusin o
exclusin de algn tem. Al analizar las respuestas se revisaron todos los tems que, al menos
en dos ocasiones, haban sido calificados con un 4 (Bastante) o una puntuacin inferior.
Instrumento
Tras revisar la literatura pertinente, se identificaron un conjunto de temticas que
podan ser incluidas en el diseo del Cuestionario sobre Estilos de Interaccin en Atencin
Temprana (EIAT) en sus dos versiones (profesionales y cuidador principal). Para contrastar la
validez e importancia de esos constructos o temticas y delimitar los elementos que en ellos
podramos incluir, se constituyeron dos grupos focales de discusin: uno con 15 terapeutas de
AT en ejercicio (11 logopedas y 4 terapeutas de estimulacin, todos ellos de CDIATs de las
provincias de Valencia, 11 profesionales, y Castelln, 4 profesionales) y otro por 13
familiares de nios con necesidades de AT (5 padres y 8 madres) que estaban asistiendo a un
CDIAT de esas mismas provincias (9 valencianos y 4 castellonenses).
A partir de los resultados del anlisis de los constructos identificados en las
transcripciones de las discusiones de los grupos focales, se construyeron las dos versiones
iniciales del cuestionario (la de profesionales, con 44 tems, y la de cuidadores principales,
con 42 tems). Ambos instrumentos estn orientados a delimitar y valorar actuaciones y
prcticas concretas que pueden favorecer la adhesin a las orientaciones realizadas por los
profesionales en su ejercicio de una accin tutorial. Los tems quedaron repartidos en 6
dimensiones: estilo de transmisin de la informacin, flexibilidad, fluidez en la comunicacin,
desarrollo de competencias familiares, facilitacin de ayuda y coordinacin con otros agentes.
La distribucin de los tems en las diferentes dimensiones, aparece recogida en la Tabla 1.
978-84-695-8363-0
1456
Tabla 1
Nmero de tems por dimensin en cada una de las versiones iniciales del cuestionario
DIMENSIONES
Estilo de transmisin de la informacin
Flexibilidad
Comunicacin fluida
Competencias familiares
Ayudar-estimular
Coordinacin
TOTAL
Cuidador Principal
8
4
10
12
6
2
42
Profesionales
8
5
9
12
7
3
44
Resultados
La Tabla 2 recoge el volumen de tems que los jueces propusieron eliminar, incorporar
o redactar de forma alternativa, para cada una de las versiones del cuestionario. La Tabla 3
resumen las valoraciones (medias y desviaciones tpicas), en cuanto a la claridad y
representatividad de cada tem en cada versin del cuestionario. Se revisaron todos los tems
que al menos en dos jueces no obtenan la puntuacin de 5, es decir, todos aquellos cuya
media era inferior a 4,88 puntos en el caso del cuestionario dirigido a cuidadores principales
(valorado por 16 jueces) y de 4,82 puntos en el caso del cuestionario dirigido a profesionales
(valorado por 11 jueces). Adems se analizaron los comentarios de los diferentes jueces con
respecto a los distintos tems.
Tabla 2
Volumen de propuestas de eliminacin, inclusin y redaccin alternativa de tems
del Cuestionario EIAT realizada durante el juicio de expertos
Versin profesionales
Eliminados
Nuevos
Redaccin
alternativa
14
978-84-695-8363-0
1457
Tabla 3
Resultados de la valoracin por jueces del Cuestionario EIAT dirigido a cuidadores principales
Cuidadores principales
Item
Estilo de
transmisin de
la informacin
Flexibilidad
Comunicacin
fluida
Competencias
familiares
Ayudarestimular
Coordinacin
1
2
3
4
5
6
7
8
1
2
3
4
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
1
2
3
4
5
6
7
1
2
3
Claridad
Media
dt
5
4,88
4,69
4,53
4,75
4,73
4,40
4,71
4,5
5
4,94
4,81
5
4,62
4,88
5
5
4,88
4,75
4,88
5
5
4,88
4,75
4,94
4,75
4,56
4,81
4,6
4,88
4,88
4,81
4,81
4,94
4,31
4,31
4,75
4,88
4,94
5
4,88
4,93
-
0
0,342
0,602
0,990
0,683
0,704
0,910
0,611
0,730
0
0,250
0,544
0
1,088
0,5
0
0
0,342
0,577
0,5
0
0
0,5
0,577
0,250
0,577
0,629
0,403
0,894
0,342
0,342
0,544
0,544
0,250
1,014
1,014
0,577
0,342
0,250
0
0,342
0,258
-
Profesionales
Representatividad
Media
dt
4,94
4,94
4,94
4,87
4,93
4,80
4,60
4,57
4,69
4,69
4,69
4,63
4,80
4,56
4,81
5
4,88
4,81
4,75
4,63
5
4,88
5
4,73
4,6
4,47
4,80
4,87
4,8
4,8
4,73
4,87
4,93
4,80
4,81
4,75
4,75
4,88
4,94
5
4,94
4,87
-
0,250
0,250
0,250
0,516
0,258
0,561
0,828
0,938
0,704
0,602
0,704
0,885
0,561
1,031
0,750
0
0,342
0,544
0,577
0,885
0
0,5
0
0,458
0,632
0,834
0,414
0,352
0,447
0,561
0,458
0,516
0,258
0,561
0,544
0,577
0,577
0,500
0,250
0
0,250
0,352
-
Claridad
Media
dt
4,82
4,82
4,64
4,64
4,90
4,82
4,50
4,78
4,64
4,80
5
5
4,64
4,45
4,91
5
4,64
4,67
4,82
4,90
4,73
4,82
4,73
4,82
4,36
4,55
4,6
4,7
5
4,73
4,64
4,91
4,82
4,73
4,64
4,73
4,82
5
4,82
5
4,91
4,91
4,91
0,405
0,405
0,674
0,924
0,316
0,405
0,972
0,441
0,924
0,422
0
0
0,924
1,293
0,302
0
0,924
1,000
0,405
0,316
0,647
0,603
0,647
0,603
1,027
0,820
0,699
0,675
0
0,647
0,809
0,302
0,603
0,467
0,924
0,647
0,603
0
0,603
0
0,302
0,302
0,302
Representatividad
Media
dt
5
4,91
5
4,91
4,55
4,91
4,6
4,89
4,91
4,70
4,78
4,73
4,64
4,18
5
4,91
4,91
4,89
4,91
4,90
5
4,90
4,80
4,70
4,50
5
5
4,67
4,91
4,64
4,82
4,73
4,90
4,73
4,91
4,91
4,64
5
4,91
4,82
4,91
4,91
4,64
0
0,302
0
0,302
1,214
0,302
0,966
0,333
0,302
0,675
0,667
0,647
0,924
1,328
0
0,302
0,302
0,333
0,302
0,316
0
0,316
0,422
0,949
0,972
0
0
0,707
0,302
0,674
0,405
0,467
0,316
0,647
0,302
0,302
0,809
0
0,302
0,405
0,302
0,302
0,809
978-84-695-8363-0
1458
Discusin
Las aportaciones realizadas por el grupo de expertos, ha permitido depurar de forma
satisfactoria el instrumento diseado. Aunque no ha cambiado prcticamente el nmero de
tems totales (solo a aumentado en uno la versin del instrumento para cuidadores principales
978-84-695-8363-0
1459
del nio y se ha reducido en un tem la versin de los profesionales), si se han modificado las
redacciones de prcticamente el 40% de los tems. Adems se han sido eliminados tems y se
han introducido otros nuevos. Pero sobre todo ha servido para delimitar con mayor exactitud
las dimensiones en las que se reparten los tems, las cuales han pasado de las 6 iniciales a 4 en
la versin definitiva. Por todo ello valoramos como muy positiva la estrategia de valoracin
por expertos, cuando sta se aplica acompaada de instrucciones precisas para que los
expertos valoren los aspectos concretos para los que su opinin se entiende especialmente
relevante. En este sentido, entendemos que es una estrategia ms a tener en cuenta a la hora de
elaborar un cuestionario y que se debe sumar a otras propuestas metodolgicas igualmente
necesarias.
El instrumento desarrollado cubre la necesidad de detectar los estilos de interaccin
que se estn llevando a cabo en AT entre profesionales y familias, para que, ya sea a modo de
autoevaluacin profesional, o dentro de estudios annimos ms globalizados, se puedan
analizar fortalezas y debilidades y, a partir de ellas, y una vez contrastadas opiniones de
profesionales y cuidadores principales, realizar las oportunas propuestas de mejora. Tambin
es el primer paso para analizar cmo se estn desarrollando los modelos de actuacin en AT y
si existe una tendencia a un cambio en los sistemas de intervencin tradicional hacia unos
ms favorables a la familia, que estn en consonancia con las recomendaciones que llegan
desde instancias europeas y extracomunitarias. El siguiente paso para la mejora del
cuestionario construido lo constituye su aplicacin a modo de prueba piloto, que ser llevada
a cabo en varios Centros de Desarrollo Infantil y Atencin Temprana de la Regin de Murcia.
Referencias
Bailey, D. B., Raspa M., Humphreys, B. P., y Sam, A. M. (2011) Promoting family outcomes
in early intervention. En J.M. Kauffman y D.P. Hallahan (Eds.), Handbook of special
education (pp. 668-684). New York, NY: Routledge.
Bailey, D. B., Raspa, M., y Fox, L. C. (2012) What is the future of family outcomes and
family-centered services? Topics in Early Childhood Special Education. 31(4), 216223.
Bronfenbrenner, U. (1995). Developmental ecology through space and time: a future
perspective. En P. Moen, G. H. Elder y K. Lusher (Dir.), Examining lives in context:
perspectives on the ecology of human development (pp. 619-647). Washington DC:
American Psychological Association.
De Linares, C. y Rodrguez, T. (2004). Base de la intervencin familiar en atencin temprana.
En J. Prez-Lpez y A. Brito (Coords.), Manual de atencin temprana (pp. 233-251).
Madrid: Pirmide.
Dunst, C. J. (2005). Mapping the adoption, application, and adherence to family support
principles. Practical Evaluation Reports, 1(2), 17.
Escorcia, C.T., Snchez-Lpez, C. y Garca Snchez, F.A. (2012). Dimensiones a considerar
para fomentar la adhesin a las recomendaciones logopdicas en Atencin Temprana.
En AELFA (Eds.), Libro de Actas. XXVIII Congreso Internacional AELFA (pp. 323331). Madrid: Editorial Complutense.
978-84-695-8363-0
1460
978-84-695-8363-0
1461
Resumen
En los ltimos diez aos se ha desarrollado ampliamente el uso de mtodos visuales en la
investigacin cualitativa. El objetivo de esta comunicacin es analizar el potencial de los
mtodos visuales como estrategia para favorecer investigaciones inclusivas. Para ello se
presentan dos investigaciones en las que se han utilizado fotografas para desarrollar
entrevistas dirigidas a conocer los puntos de vista de personas con trastorno mental grave
(TMG) y de personas con discapacidad intelectual sobre aspectos que facilitan o dificultan su
proceso de inclusin social y laboral. A partir de ejemplos del trabajo realizado con los
participantes reflexionamos sobre la utilizacin de fotografas, especialmente con relacin a
su potencial para favorecer la participacin de las personas en la investigacin y para
fomentar la investigacin inclusiva.
Introduccin
La expresin investigacin inclusiva aparece en los aos 60 del siglo XX de la mano
de autores como Walmsley, al constatar que las voces de las personas con discapacidad
intelectual no estaban representadas en la investigacin educativa y social. Estas personas
eran observadas, sometidas a pruebas, analizadas, descritas, pero no se les preguntaba sobre
sus puntos de vista (Walmsley, 2001). Desde hace una dcada han proliferado en pases como
978-84-695-8363-0
1462
el Reino Unido estudios en los que las personas con discapacidad intelectual tienen un papel
mucho ms activo en las investigaciones que les afectan: pueden ser financiadoras, asesoras,
investigadoras, autoras y difusoras de la investigacin (Tuffrey-Wijney Butler, 2009). Sin
embargo, en Espaa son todava escasas las investigaciones realizadas desde un enfoque
inclusivo.
La investigacin inclusiva comprende varios enfoques metodolgicos que se
caracterizan por situar las voces de los participantes en el centro de la investigacin,
potenciando diseos y enfoques participativos. Estos diseos tienen el objetivo de implicar a
las personas de forma ms efectiva que en la investigacin tradicional, facilitando enfoques
ms empticos y democratizadores (Walmsley y Johnson, 2003). Aunque el concepto de
investigacin inclusiva surge en el contexto de la investigacin relacionada con personas
con discapacidad intelectual, se ha extendido la idea de conseguir que la investigacin en el
mbito educativo y social sea ms inclusiva y se utiliza en relacin a otros colectivos que
algunos autores engloban bajo la expresin participantes vulnerables (Aldridge, 2012).
La incorporacin en la investigacin de la perspectiva inclusiva implica, en primer
lugar, asegurar que las personas pertenecientes a grupos vulnerables tienen oportunidades de
participar en la investigacin que les afecta, no nicamente como informantes sino como
participantes activos en los procesos de toma de decisiones sobre el estudio; en segundo lugar,
garantizar que estn representados en diferentes etapas de la investigacin y, finalmente,
promover proyectos colaborativos que favorezcan el equilibrio de puntos de vista y, por tanto,
se incremente el rigor y el alcance de la investigacin (Gill, 1999; Walmsley y Johnson,
2003). Gill (1999) ofrece algunas recomendaciones para incorporar la perspectiva inclusiva en
la investigacin con personas con discapacidad, de la cuales subrayamos dos que hemos
tenido en cuenta en las dos investigaciones que sirven de base para elaborar esta
comunicacin. Una se refiere a la necesidad de asegurar que las personas con discapacidad
son libres de expresar sus puntos de vista con su propia voz, que sus perspectivas se respetan
y que su trabajo es adecuadamente reconocido. Una segunda recomendacin hace referencia a
la conveniencia de utilizar mtodos mltiples para garantizar que los resultados sean precisos
y comprensivos, ya que la discapacidad es un fenmeno complejo que requiere enfoques
complejos de recogida de informacin que garanticen su comprensin global. Tanto si nos
referimos a personas con discapacidad intelectual como a personas con trastorno mental
grave, el hecho es que el enfoque inclusivo nos impulsa a profundizar y a reflexionar sobre
cmo puede trasladarse este planteamiento en el diseo y el desarrollo de investigaciones.
La perspectiva inclusiva de la investigacin y, con ello, la bsqueda de mtodos
cualitativos participativos, flexibles y adaptables a las caractersticas de las personas con
discapacidad o con TMG nos lleva a plantear la conveniencia de utilizar mtodos visuales.
Los mtodos visuales de recogida de datos permiten proporcionar evidencia significativa para
estos y otros grupos vulnerables, facilitan la introspeccin, y pueden ser tiles no solamente
para interpretar y representar la experiencia sino tambin para ilustrar y dar testimonio de ella
(Packard, 2008; Finlay, Sheridan et al., 2010; Aldridge, 2012).
Los mtodos visuales en investigacin cualitativa tienen su origen en la antropologa y
en la sociologa visual (Holm, 2010). Incluyen el uso de pelculas, video, fotografa, dibujos,
mapas, diagramas, etc. Aunque inicialmente estos mtodos, sobre todo la fotografa y el
vdeo, se utilizaron para recoger datos y como fuente de datos, actualmente se considera que
constituyen un medio para facilitar la participacin de las personas en la investigacin y para
crear nuevo conocimiento. Son tiles para establecer un dilogo con los participantes y alentar
978-84-695-8363-0
1463
la exploracin de sus historias de vida, as como para obtener la historia que las personas
desean explicar (Yates, 2010)
Las fotografas se emplean en la investigacin social en un rango que supone diversos
niveles de participacin. Un primer nivel implica utilizar las fotografas como estmulo para
alentar a los participantes a hablar sobre un tema. El segundo nivel es parecido al anterior
pero los participantes realizan sus propias fotografas aunque los investigadores mantienen el
control de la investigacin y determinan los hallazgos. Un tercer nivel que implica mayor
grado de participacin incluye el fotovoz, en el que los participantes deciden tanto lo que
quieren fotografiar como lo que quieren contar sobre un rea de inters (Boxall y Ralph,
2009).
En investigacin inclusiva los mtodos deben ser flexibles y abiertos y fomentar la
capacidad de las personas para expresarse, adaptndose a sus caractersticas y posibilidades
reales para comunicarse. Sin embargo, los mtodos visuales no solamente son tiles cuando
las personas tienen dificultades de comunicacin oral; tambin pueden resultar adecuados
cuando aquello que la persona desea expresar se ubica en el terreno de las emociones y
sentimientos o cuando evoca experiencias que son difciles de comunicar a travs de palabras
(Bagnoli, 2009, Harper, 2002, Keats, 2009, Pink, 2006, ProsseryLoxley, 2008).
978-84-695-8363-0
1464
978-84-695-8363-0
1465
Finalmente, una vez presentadas todas las fotografas se pidi a cada joven que escogiera una
para colgarla en un mural y que asociara una palabra o una frase a la imagen seleccionada.
La sesin fue registrada en audio y transcrita para su posterior anlisis. La informacin
se integra en el conjunto de datos recogidos para cada caso. En esta comunicacin interesa
destacar algunos aspectos de esta actividad en concreto que nos permiten valorar el uso de las
fotografas. Los jvenes pusieron nfasis en aspectos que les ayudan en su vida cotidiana y
que les resultan importantes para mejorar su autonoma; insistieron en la necesidad de realizar
en su tiempo libre actividades que les generen satisfaccin; tambin discutieron sobre las
dificultades que hallaron en la etapa de educacin secundaria obligatoria, y pusieron de
relieve las dificultades de la relacin con los compaeros. Destacaron tambin la necesidad de
tener confianza en uno mismo, entre otros temas. Veamos algunos ejemplos.
Ricard seleccion la fotografa de su reloj de pulsera. Al preguntarle por qu haba
fotografiado este reloj dijo que le resultaba muy til para saber la hora. Esto, que parece una
afirmacin banal, tiene su importancia. El joven, para llegar al centro donde realiza la
formacin, debe levantarse temprano y coger un autobs y otro para volver. El control del
tiempo ha adquirido una gran importancia para l en el curso 2012-13 si se compara con
cursos anteriores. Lograr este control implica una mayor autonoma. Merc fotografa una
pieza de cermica que ella misma hizo cuando tena 14 aos. A raz de esta fotografa
comenta como ha sido y es para ella importante aprender a hacer cermica, que ha sido una
actividad extraescolar que ha llevado a cabo durante bastantes aos. Comenta que quiere
seguir con esta actividad: con ella, me olvido de los problemas y me lo paso bien. Adems,
algunas veces en que dudaba de su capacidad para realizar determinadas piezas, el hecho de
acabar realizndolas le ha ayudado a confiar en sus posibilidades: creer en m misma, es lo
que significa, que pude hacerlo yo sola y al principo no crea y ahora, viendo esta foto digo:
tengo que creer. Otro chico, Nacho, fotografa productos de limpieza. Comenta que la
primera vez que empez a limpiar pens: esto lo podra hacer yo en un futuro (las tareas de
limpieza forman parte del programa de formacin, como aspectos relacionados con la
autonoma). Tambin fotografa un CD: Pens en la msica Cuando me pongo a limpiar
siempre lo pongo y lo escucho, sobre todo, cuando limpio. Y la cocina. Mi madre me ense
a cocinar y en un futuro . ya conseguir cocinar. Elisenda seleccion una fotografa en que
se ve a un hombre levantando una enorme roca. La joven comenta: He escogido esta foto
que, bueno, es un hombre que hace el esfuerzo de levantar la piedra que, en mi caso, cuando
yo iba al instituto y haca 4 de ESO, me cost un poco. Dijeron que quiz repetira porque me
costaba ir y, bueno, por los horarios que eran demasiado largos. Y tambin la gente de all que
no me terminaba de gustar del todo. A raz de esta fotografa otra joven comenta que la ESO
fue un esfuerzo pero que ahora quiz el esfuerzo est ms en buscar o encontrar trabajo.
Discusin y conclusiones
Valoramos positivamente la introduccin de las fotografas en el contexto de
entrevistas en profundidad individuales (investigacin 1) y tambin en la entrevista en grupo
(investigacin 2). Introducir, en la etapa de recogida de datos, la posibilidad de que los
participantes puedan elegir sobre lo que quieren hablar y que dispongan de margen de libertad
para expresarse fomenta la participacin. Las personas dejan de ser simples informantes que
responden a las preguntas formuladas por los investigadores. En cierto modo ello constituye
un paso hacia un mayor empoderamiento: no solo deciden qu fotografiar sino tambin de qu
fotografas quieren hablar y qu quieren contar de cada una de ellas. Con ello es el
participante quien gua la entrevista, y no tanto el investigador, con lo que se produce un
978-84-695-8363-0
1466
cierto cambio en los roles tradicionales entre investigador y participante (Prossery Loxley,
2008).
Los ejemplos que hemos comentado muestran que la introduccin de fotografas en la
investigacin cualitativa tiene un gran potencial para conocer las perspectivas de las personas
participantes, destacando los aspectos de su vida positivos o no tan positivos que para
ellas son importantes. Las fotografas proporcionan a los participantes la oportunidad de
elegir qu fotografiar, de seleccionar las imgenes que quieren compartir con las
investigadoras y los compaeros de grupo, y de explicar sobre ellas lo que deseen. Adems,
fomentan el dilogo entre participantes e investigadores, y entre los participantes entre s en el
caso del estudio realizado con jvenes.
Otro aspecto a considerar tiene relacin con el potencial de este mtodo para generar
empata en el contexto de la entrevista. Estudiar cmo la enfermedad mental afecta a las vidas
de las personas es un tema delicado tanto para las personas afectadas, como para los
profesionales y para los investigadores, quienes deben tener especial tacto cuando se invita a
estas personas a analizar temas que pueden afectar a su propia identidad. Del mismo modo,
estudiar desde la perspectiva inclusiva la transicin a la vida adulta, incluyendo la vida
laboral, de jvenes con discapacidad intelectual implica conocer cules son sus expectativas,
sus dudas, sus miedos. En ambos casos resulta necesario buscar recursos que permitan
establecer puentes entre investigadores que no tienen una relacin personal ni profesional
con los participantes y los participantes. A partir de la experiencia realizada podemos
defender que los mtodos visuales en general, y las fotografas en particular, ayudan a
establecer dicha relacin, entre otras cosas, porque el uso de las fotografas acompaadas de
la narracin de la persona pone nfasis en la persona y no en la enfermedad mental o en la
discapacidad.
Hay que tener en cuenta algunas consideraciones a la hora de decidir emplear este tipo
de mtodos. En primer lugar, se necesita disponer de un intervalo de tiempo amplio. Desde
que se proporciona la cmara a la persona, sta la devuelve y se obtienen las fotografas,
transcurre un periodo que, si resulta demasiado largo, afecta al significado que la persona
atribuye a la imagen, pudiendo desaparecer o quedar minimizado. Adems, el nivel de
habilidad del participante en el uso de la cmara puede condicionar su participacin, porque la
persona lo puede interpretar como un reflejo de su falta de competencia e inhibirse de la tarea
(Packard, 2002). Por lo tanto, es necesario adaptar las instrucciones en funcin de cada caso
individual.
El empleo de estos mtodos tiene tambin algunas implicaciones ticas respecto al
anonimato, la confidencialidad y el control de la imagen que no solamente afectan a los
investigadores sino tambin a los participantes (Lomax et al., 2011). Pedimos a los
participantes que no tomaran fotografas de personas de forma que pudieran ser identificadas,
con el fin de proteger la imagen de aquellas personas que podan aparecer en las fotografas.
Ello propici que algunas personas tuviesen que pensar en formas simblicas (fotografiar
partes del cuerpo, objetos) para representar a personas y otros simplemente evitaron realizar
este tipo de fotografas. Con frecuencia, la comprensin de la narracin por parte del
investigador es posible si tiene conocimiento de la situacin de la persona. Cuando los
participantes son personas con discapacidad intelectual se hace bastante evidente que para
interpretar lo que la persona verbaliza a travs de las fotografas es necesario conocer a la
persona, su trayectoria vital. Es decir, se necesitan mtodos complementarios que permitan
comprender lo que las personas desean expresar. Esto conlleva una cuestin tica: por un lado
978-84-695-8363-0
1467
Referencias
Aldridge, J. (2012). Working with vulnerable groups in social research: Dilemmas by default
and design. Qualitative Research, 1-19.doi: 10.1177/1468794112455041
Bagnoli, A. (2009). Beyond the standard interview: The use of graphic elicitation and artsbased methods. Qualitative research, 9(5), 547-570.
Boxall, K. y Ralph, S. (2009). Research ethics and the use of visual images in research with
people with intellectual disability. Journal of Intellectual and Developmental
Disability, 34(1), 45-54.
Finlay, I., Sheridan, M., McKay, J. y Nudzor, H. (2010). Young people on the margins: in
need of more choices and more chances in twenty-first century Scotland. British
Educational Research Journal, 36(5), 851-867.
Gill, C. J. (1999). Invisible ubiquity: The surprising relevance of disability issues in
evaluation. American Journal of Evaluation, 20(2), 279-297.
Harper, D. (2002). Talking about pictures: A case for photo elicitation. Visual Studies, 17(1),
13-26.
Holm, G. (2010). Visual research methods where are we and where are we going? S. Nagy &
P. Leavy (Eds.), Handbook of emergent methods (pp. 325-341). New York: The
Guilford Press.
Keats, P. (2009). Multiple text analysis in narrative research: Visual, written, and spoken
stories of experience. Qualitative Research, 9, 181-195.
Lomax, H., Fink, J., Singh, N. y High, Ch. (2011). The politics of performance:
methodological challenges of researching childrens experiences of childhood through
the lens of participatory video. International Journal of Social Research Methodology,
14(3), 231-243.
978-84-695-8363-0
1468
Packard, J. (2008). Im gonna show you what its really like out here: The power and
limitation of participatory visual methods. Visual Studies, 23(1), 63-77.
Pink, S. (2006). Doing visual ethnography: Images, media and representation in research.
London: Sage Publications.
Prosser, J. y Loxley, A. (2008). Introducing visual methods. Disponible en <
http://eprints.ncrm.ac.uk/420/1/MethodsReviewPaperNCRM-010.pdf >
Tuffrey-Wijne,R.N. y Butler, G. (2009). Co-researching with people with learning
disabilities: An experience of involvement in qualitative data analysis. Health
Expectations, 13, 174-184.
Walmsley, J. (2001). Normalisation, emancipatory research and inclusive research in learning
disability. Disability & Society, 16, 187-205.
Walmsley, J. y Johnson, K. (2003) Inclusive research with people with learning disabilities:
Past, present and future. London: Jessica Kingsley Publishers.
Yates, L. (2010). The story they want to tell, and the visual story as evidence: Young people,
research authority and research purposes in the education and health domains. Visual
studies, 25(3), 280-291.
978-84-695-8363-0
1469
Resumen
El objetivo de la investigacin es conocer el mantenimiento de los efectos del Programa de
Competencia Familiar (PCF), un programa multicomponente (trabaja con padres, hijos y
con el conjunto de la familia), desde una perspectiva de cambio cognitivo y emocional.
Consta de 14 sesiones, precedidas por una sesin de preparacin y seguidas por una sesin
de apoyo a los 6 meses de finalizar la aplicacin. El estudio pretende determinar el
mantenimiento de los efectos a largo plazo en las familias participantes en las aplicaciones,
basadas en un diseo cuasi-experimental, realizadas en Servicios Sociales y en Proyecto
Hombre en todo el Estado entre 2009 y 2010. Se trata de un estudio longitudinal de 136
familias. Se realizaron tres evaluaciones a lo largo de 30 meses con un protocolo completo,
incluyendo instrumentos validados para el diagnstico de la competencia familiar. El modelo
de riesgo proporcional de Cox se utiliz para analizar el mantenimiento de resultados. Para
los 11 factores familiares considerados, se observan resultados positivos en siete de ellos.
978-84-695-8363-0
1470
Introduccin
El objetivo de la investigacin es conocer el mantenimiento de los efectos de un
programa socioeducativo de enfoque conductual y sistmico, el Programa de Competencia
Familiar (PCF). El PCF es un programa multicomponente (trabaja con padres, hijos y con el
conjunto de la familia), desde una perspectiva de cambio cognitivo y emocional. Consta de 14
sesiones, precedidas por una sesin de preparacin y seguidas por una sesin de apoyo a los 6
meses de finalizar la aplicacin. El estudio pretende determinar el mantenimiento de los
efectos a largo plazo en las familias participantes en las aplicaciones, basadas en un diseo
cuasi-experimental, realizadas en Servicios Sociales y en Proyecto Hombre en todo el Estado
entre 2009 y 2010, prestando atencin a los factores principales de riesgo en las familias.
El Programa de Competencia Familiar (PCF), como la versin original del programa,
el Strengthening Families Program (SFP) funcionan a corto y medio plazo (Orte, Ballester
and March, 2013; Kumpfer & Alvarado, 2003). Sin embargo, entendemos que no todos los
factores tienen la misma importancia para explicar los cambios en la competencia de las
familias a largo plazo. Por ello, consideramos como hiptesis inicial que los factores ms
relevantes son aquellos que la familia puede controlar y desarrollar de forma autnoma.
Originariamente, se realiz un diseo cuasi-experimental multigrupo, con medidas
pretest y postest, as como con grupo de control no equiparado. El tratamiento longitudinal ha
consistido en una tercera toma de datos a los dos aos de finalizar cada una de las
aplicaciones del PCF.
El riguroso control de las condiciones experimentales (eliminacin, constancia de las
condiciones), en todas las aplicaciones y en los seguimientos longitudinales, permite tratar los
diversos grupos experimentales como un nico grupo con diversas aplicaciones, aunque
siempre se han considerado de forma separada los grupos del Proyecto Hombre (PH) de los
grupos de Servicios Sociales (SS SS). Los controles realizados en las experiencias son
diversos. Se han eliminado variables perturbadoras diversas (dificultades de transporte,
guardera para los hijos menores, etc.). Se han mantenido constantes las condiciones
experimentales, mediante control directo por parte de miembros del equipo de investigacin:
siempre se aplica con fidelidad el mismo programa, se controla la duracin de las sesiones, se
mantienen constantes las condiciones ambientales de las salas, etc. Se utilizan los mismos
instrumentos en dos tomas de datos realizadas segn el mismo protocolo, incluyendo a todos
los sujetos participantes. Por lo que se refiere a los controles utilizados en los seguimientos,
han tenido en cuenta todo un conjunto de dificultades. Se han realizado siempre los contactos
a partir de los profesionales de referencia de los servicios implicados (PH y SS.SS),
neutralizando la extraeza de los participantes ante el nuevo contacto. Las tomas de datos se
han realizado con los mismos instrumentos, escalados por edades en los casos en los que se
realizan diagnsticos. Los protocolos de toma de datos se han respetado estrictamente en
todos los casos.
Mtodos
Muestra
En todas las familias se ha considerado un nico hijo como referente del anlisis,
contando con tantos hijos como familias han participado, es decir, en total se ha contado con
136 familias, con lo cual se han estudiado 136 hijos de dichas familias. El grupo experimental
978-84-695-8363-0
1471
en PH estaba formado por 73 familias que haban finalizado el PCF en el perodo 2009-2011,
de las cuales se han conseguido seguimientos efectivos con 44 familias, es decir, un 60,27%.
Se han considerado seguimientos en el ltimo trimestre de 2012 para aquellas familias que
finalizaron el programa en 2011, de tal manera que se podr ampliar el porcentaje de xito en
los seguimientos. El grupo experimental en PH se ha constituido a partir de 11 aplicaciones
del programa de competencia familiar, realizadas en 11 ciudades de Espaa entre 2009 y
2011. El grupo experimental en SS.SS estaba formado por 217 familias, que haban finalizado
el PCF en el perodo 2009-2011, de las cuales se ha conseguido la colaboracin de 92 familias
(42,40%). El grupo experimental en SS.SS se ha constituido a partir de 29 aplicaciones del
programa de competencia familiar, realizadas en 17 municipios o zonas de Baleares entre
2009 y 2011.
La Tabla 1 resume los datos ms relevantes de la muestra analizada. En conjunto, se
cuenta con 136 familias (46,9%), un volumen muy significativo de los grupos experimentales
originales.
Tabla 1
Seguimiento de las familias participantes
Familias PH
Familias SS SS
TOTAL
Inicio PCF
87
292
379
Final PCF
73
217
290
%
83,91%
74,32%
76,52%
Seguimiento
44
92
136
% (final
PCF)
60,27%
42,40%
46,90%
En los dos grupos se ha contado con grupos de control, constituidos por familias de las
mismas caractersticas que las participantes en las experiencias del PCF. Las caractersticas
del grupo experimental y del grupo de control eran significativamente similares. En PH se ha
podido contar con un grupo de 6 familias (13,64% de las familias participantes en el
seguimiento), mientras en SS.SS se ha podido contar con la colaboracin de 12 familias
(13,04% de las familias participantes en el seguimiento).
La edad media de los padres de PH que completaron el seguimiento era de 39,77 aos
(SD= 4,094), mientras que la de los hijos era de 12,09 aos (SD= 2,448). La edad media de
los padres del grupo de control era de 41,67 aos (SD= 6,861), la de los hijos era de 12,5 aos
(SD= 2,345). Las diferencias no son significativas ni en los padres ni en los hijos. Por su
parte, la edad media de los padres de SS.SS que completaron el seguimiento era de 41,46 aos
(SD= 7,952), mientras que la de los hijos era de 11,25 aos (SD= 1,942). La edad media de
los padres del grupo de control era de 41,42 aos (SD= 13,983), la de los hijos era de 10,58
aos (SD= 1,782). Las diferencias no son significativas ni en los padres ni en los hijos.
Por lo que se refiere al sexo, el 50% de los hijos que formaban el grupo experimental de
PH son de sexo femenino, mientras en el grupo control el porcentaje es del 83,33%. Los
criterios de inclusin de las familias, as como la voluntariedad han limitado la capacidad de
ampliar la representacin de los hijos de sexo masculino en el grupo de control. Por lo que
respecta al grupo experimental de SS.SS, un 33,70% de los hijos son de sexo femenino,
mientras en el grupo de control el porcentaje es del 50%.
978-84-695-8363-0
1472
Instrumentos
Para el anlisis del cambio en las familias se ha considerado la factorizacin establecida
por Kumpfer en sus cuestionarios de padres y de hijos (cuestionario KK-Padres y cuestionario
KK-hijos, Kumpfer, 1998). Tambin se utilizan los cuestionarios del sistema de evaluacin de
la conducta de nios y adolescentes (BASC, Reynolds y Kamphaus, 2004). Por lo que se
refiere a los cuestionarios BASC, se trabaja exclusivamente con las escalas que ofrece el
propio sistema de evaluacin, validado especficamente para poblacin espaola y corregido
directamente siguiendo los protocolos de dichas pruebas. Tambin se ha aplicado un
cuestionario de valoracin del PCF.
Diseo
La observacin de los resultados, tanto en los padres y madres como en los hijos, se
realiza a partir de las comparaciones entre la situacin inicial (pretest) y final (postest al final
del PCF y anlisis longitudinal dos aos despus) del grupo experimental, habiendo realizado
mediante anlisis de varianza la comparacin con el grupo de control en cada uno de los
factores que se consideran. Las dimensiones de la muestra, cuando se hacen los clculos de
cada tipo de servicio, limitan el anlisis inferencial de los resultados, pero la validez de los
resultados es muy consistente; desde esta perspectiva, se pueden constatar resultados en una
amplia serie de factores. Para establecer la significacin de los resultados se han considerado
de forma ms destacada las diferencias entre la situacin al final del PCF y la situacin dos
aos despus (seguimiento o anlisis longitudinal) del grupo de padres e hijos que han
completado el programa y han podido ser contactados posteriormente.
La presentacin del anlisis de los datos, necesariamente se debe mostrar de forma
resumida, prestando atencin a los principales factores identificados, as como la informacin
estadstica necesaria para explicar la discusin posterior. Se analizan los datos sobre el
proceso posterior a la aplicacin del programa en el conjunto de sus aplicaciones.
Para la presentacin de los resultados se han diferenciado los dos tipos de servicios,
presentando primero los de PH y despus los de SS.SS. Tambin se han considerado primero
las diferencias entre la situacin al final del PCF y la situacin del seguimiento dos aos
despus, seguida de las diferencias en el seguimiento a dos aos entre el grupo experimental y
el grupo de control.
Las hiptesis que sistemticamente se contrastan son, primero, las del mantenimiento de
los efectos entre el final del PCF y el seguimiento dos aos despus de las familias
participantes en el programa (grupo experimental). El otro tipo de hiptesis, para la presente
comunicacin, se centran en la importancia diferencial de los factores considerados, de
acuerdo al criterio establecido anteriormente (factores ms relevantes: los que la familia
pueda controlar y desarrollar de forma autnoma).
Se realizaron anlisis multivariados y se estimaron los efectos a 30 meses, con los
intervalos de confianza del 95% (IC). El modelo de riesgo proporcional de Cox se utiliz para
analizar el mantenimiento de resultados. Se consider significativo un valor de p < 0,05.
Resultados
Para los 11 factores familiares considerados, en trminos generales y para el conjunto
978-84-695-8363-0
1473
de la muestra, se observan resultados positivos en siete de ellos: relaciones entre los padres y
los hijos (p=0,017), cohesin familiar (p=0,001), parentalidad positiva (0,000), implicacin
familiar (0,006), control de problemas escolares (p= 0,036), habilidades sociales (p= 0,003) y
capacidad de autocontrol (p= 0,003).
El primer conjunto de factores analizados se refieren al conjunto de la familia o a los
propios padres. Se consideran los seis factores resultantes de la factorizacin del cuestionario
para padres. Inicialmente, se presentan los resultados de las familias de PH (Ver Tablas 2a y
2b). El segundo, el tercero y el quinto factor son significativos. El segundo factor se refiere a
la relacin entre los padres y los hijos, en el contexto familiar. Los resultados muestran un
incremento significativo de los valores observados al final del PCF (p=0,017). El tercer factor
informa sobre la cohesin familiar. Dicho factor en el cuestionario de padres se refiere a la
baja conflictividad y las buenas relaciones. Los resultados tambin muestran un incremento
significativo de los valores observados al final del PCF (p=0,017). El quinto factor informa
sobre la parentalidad positiva. Los resultados muestran una mejora significativa en el perodo
considerado desde la finalizacin del PCF (p=0,007).
Tabla 2a
Factores familiares y referidos a los padres
PROYECTO HOMBRE
Grupo
EXPERIMENTAL
(N=44)
Factor 1
Resistencia familiar
Factor 2
Relac. entre padres e hijos
Factor 3
Cohesin familiar
Factor 4
Organizacin familiar
Factor 5
Parentalidad positiva
Factor 6
Habilidades parentales
Cambios
t test Signif.
0,971 0,337
-2,475 0,017
-2,486 0,017
-0,430 0,669
-2,819 0,007
1,029 0,309
978-84-695-8363-0
1474
Tabla 2b
Factores familiares y referidos a los hijos
Factor 1
Factor 2
Factor 3
Factor 4
PROYECTO HOMBRE
EXPERIMENTAL
(N=44)
Implicacin familiar
Cohesin familiar
Control problemas escolares
Habilidades sociales
Factor 5
Grupo
1,832
8,68
Cambios
t test Signif.
-2,904 0,006
-1,032 0,308
-2,164 0,036
-3,119 0,003
1,506 -3,093
0,003
978-84-695-8363-0
1475
Tabla 3a
Factores familiares y referidos a los padres
SERVICIOS SOCIALES
Grupo
EXPERIMENTAL
Final del PCF
Seguimiento
(N=92)
Media Desv.Est. Media Desv.Est.
Factor 1
Resistencia familiar
37,76
7,902 40,49
12,571
Factor 2
Relac. entre padres e hijos
86,50
13,566 90,02
12,451
Factor 3
Cohesin familiar
22,30
3,905 23,15
3,502
Factor 4
Organizacin familiar
20,03
2,884 19,74
2,701
Factor 5
Parentalidad positiva
10,38
2,213 11,42
1,951
Factor 6
Habilidades parentales
9,47
2,783 10,25
3,621
Cambios
t test Signif.
-2,137 0,035
-2,369 0,020
-3,512 0,001
1,209 0,230
-4,350 0,000
-2,192 0,031
Grupo
Factor 1
Factor 2
Factor 3
Factor 4
Factor 5
Tabla 3b
Factores familiares y referidos a los hijos
SERVICIOS SOCIALES
EXPERIMENTAL
Final del PCF
Seguimiento
(N=92)
Media Desv.Est. Media Desv.Est.
Implicacin familiar
49,34
11,322 51,15
13,500
Cohesin familiar
15,40
4,395 15,80
4,050
Control problemas escolares
10,37
2,655 10,62
2,550
Habilidades sociales
48,35
9,326 49,76
9,430
Capacidad para poner lmites
48,35
9,326
49,76
Cambios
t test Signif.
-2,313 0,023
-1,487 0,140
-1,327 0,188
-2,296 0,024
9,430 -1,320
0,190
978-84-695-8363-0
1476
Factor 1
Factor 2
Factor 3
Factor 4
Factor 5
Implicacin familiar
Cohesin familiar
Control problemas escolares
Habilidades sociales
Capacidad para poner lmites
Fuente: Cuestionario KK-Hijos
Los datos de las familias de SS.SS que participaron en el programa (Tabla 5), tambin
permiten refutar la hiptesis de influencia de la vulnerabilidad familiar, es decir, se confirma
la hiptesis nula de no influencia significativa en los resultados de los factores y escalas. Solo
una de las escalas (capacidad para poner lmites) correlaciona con IVF.
978-84-695-8363-0
1477
Tabla 5
Correlacin entre los factores evaluados y el ndice de vulnerabilidad familiar
Implicacin familiar
Cohesin familiar
Control problemas escolares
Habilidades sociales
Capacidad para poner lmites
Una de las informaciones relevantes, para la consideracin de los efectos a largo plazo,
es la propia valoracin del PCF, una vez ha pasado el tiempo y se han podido comprobar la
utilidad del programa y la importancia que ha podido tener en el funcionamiento de la familia.
Se han considerado cuatro factores, uno de ellos se refiere al propio cumplimiento con
el programa (asistencia, realizacin de las tareas). El segundo factor se refiere a la media de
las valoraciones de los padres sobre diversos aspectos referidos a los formadores del PCF
(competencia, preparacin de las sesiones, etc.). El tercer factor sobre los materiales y las
sesiones se refiere a la calidad de los materiales, los incentivos, las salas, etc. Finalmente, el
cuarto factor, que se refiere a la evaluacin del cambio conseguido, incluye valoraciones
sobre la comunicacin con los hijos, la solucin de problemas, la organizacin y
funcionamiento familiar, etc.
Los resultados de los cuatro factores en las familias de PH (Tabla 6) muestran un
elevado cumplimiento, as como una muy buena valoracin de los formadores y los materiales
y sesiones. La valoracin de los cambios, observados a largo plazo, es positiva y notable
(equivalente a un 7,9 sobre 10), pero significativamente menor que las valoraciones
anteriores.
978-84-695-8363-0
1478
Tabla 6
Valoracin del Programa de Competencia Familiar (PCF)
PROYECTO HOMBRE (Situacin actual)
(N=44)
Media Desv.Est. Mnimo Mximo
Cumplimiento con el PCF (0-14)
12,8659
1,5693
8
14
Evaluacin de los formadores (0-5)
4,4268
0,4515
4,3805
0,4020
3,9431
0,6715
Los resultados de los cuatro factores en las familias de SS.SS (Tabla 7) muestran un
elevado cumplimiento, aunque menor que el de las familias de PH, as como una muy buena
valoracin de los formadores y los materiales y sesiones. La valoracin de los cambios,
observados a largo plazo, es positiva y notable (equivalente a un 8,2 sobre 10), pero tambin
en estas familias es significativamente menor que las valoraciones de los formadores y los
materiales y sesiones.
Tabla 7
Valoracin del Programa de Competencia Familiar (PFC)
SERVICIOS SOCIALES (Situacin actual)
(N=92)
Media Desv.Est. Mnimo Mximo
Cumplimiento con el PCF (0-14)
11,1557
2,6371
2
14
Evaluacin de los formadores (0-5)
4,5494
0,3870
4,4663
0,3879
4,0969
0,5335
978-84-695-8363-0
1479
Tabla 8a
Factores familiares y referidos a los padres
Anlisis COX
Intervalo de confianza
(N=136)
RR
Inferior
Superior
Signif.
1,03
1,03
1,02
1,01
1,01
1,01
1,02
1,00
1,00
1,00
1,05
1,04
1,03
1,02
1,02
0,001
0,003
0,030
0,036
0,039
Organizacin familiar
0,97
0,94
1,01
0,120
Anlisis COX
Tabla 8b
Factores familiares referidos a los hijos
Intervalo de confianza
(N=136)
RR
Inferior
Superior
Signif.
Implicacin familiar
Habilidades sociales
Capacidad para poner lmites
Cohesin familiar
1,04
1,03
0,99
0,99
1,03
1,01
0,97
0,92
1,05
1,04
1,01
1,06
0,000
0,001
0,220
0,750
0,97
0,94
1,01
0,120
Discusin
Entre las limitaciones de nuestro estudio se podra hacer referencia, en primer lugar, a la
potencial influencia de la deseabilidad social en las respuestas emitidas por padres, as como
por los hijos e hijas. La triangulacin de las evaluaciones de los diversos informantes aportan
un cierto control de los cambios, sin embargo, todos los cuestionarios basados en
autodeclaraciones realizadas a los sujetos que han participado en los programas formativos
tienen este riesgo. La segunda limitacin se observa en la seleccin de la muestra de familias
que han aceptado colaborar en el estudio longitudinal. No se ha podido acceder a todas las
familias que haban participado por la prdida de contacto con una parte apreciable de las
familias de servicios sociales, sea por su traslado a otras ciudades o por la ruptura voluntaria
de relaciones con los servicios sociales.
Las esperadas diferencias con los grupos de control no son concluyentes, sea por las
limitadas dimensiones de los grupos de control o por el progresivo igualamiento de las
familias. Por lo que respecta a las familias de PH que participaron como controles, el trabajo
en los diversos programas del proyecto puede haber colaborado a obtener resultados casi
comparables en todos los factores con las familias que han participado en el PCF. Las familias
de servicios sociales que han participado como controles ofrecen peores resultados, pero no
especialmente significativos.
El Programa de Competencia Familiar demuestra obtener buenos resultados con
familias en diversas situaciones de dificultad a lo largo del tiempo, con un mantenimiento
apreciable de los resultados. Con el anlisis longitudinal, la mayora de los cambios
identificados a partir de los factores considerados siguen siendo relevantes para la mayora de
las familias, obteniendo resultados bastante positivos en factores relevantes para el
978-84-695-8363-0
1480
978-84-695-8363-0
1481
Referencias
Kumpfer, K.L, & Alvarado, R. (2003). Family strengthening approaches for the prevention of
youth problem behaviors. American Psychologist, 58(6/7), 457-465.
Kumpfer, K.L. (1998). Selective prevention interventions: The strengthening families
program. En R.S. Ashery, E.B. Robertson y K.L. Kumpfer (Eds.), Drug abuse
prevention through family interventions (NIDA Research Monograph No. 177. NIH
Publication No. 99-4135). Washington DC: U.S. Government Priting Office.
Kumpfer, K.L., Pinyuchon, M., de Melo, A., & Whiteside, H. (2008). Cultural adaptation
process for international dissemination of the Strengthening Families Program (SFP).
Evaluation and Health Professions, 33(2), 226-239.
Orte, C., Ballester, L. & March, M. (2013). The family competence approach. An experience
of socio-educational work with families. Pedagoga Social, Revista Interuniversitaria,
21, 3-27.
Reynolds, C., & Kamphaus, R. (2004). BASC. Sistema de evaluacin de la conducta de nios
y adolescentes. Madrid: TEA ediciones.
978-84-695-8363-0
1482
Resumen
La adaptacin espaola del Programa de Competencia Familiar (PCF) ofrece una opcin de
trabajo socioeducativo con familias que precisan mejorar su funcionalidad. Las metodologas
socioeducativas de trabajo con familias que aplica el PCF, desarrolladas a lo largo de
procesos de duracin media (14 semanas), se han diseado en el marco del enfoque de
competencia familiar. La correcta aplicacin del PCF, de acuerdo a sus contenidos y sus
metodologas, ofrece buenos resultados contrastados en los servicios sociales de atencin
primaria con familias en situacin de dificultad. En el presente estudio se analizan un
conjunto de familias de Servicios Sociales de Atencin Primaria. Se han realizado
aplicaciones controladas del PCF, mediante un diseo cuasi-experimental con grupo de
control y medidas pretest y postest entre 2009-2010, con seguimientos posteriores hasta
2012. La muestra cuenta con 217 familias que participaron en el programa y 14 familias que
participaron en un grupo de control. Se han aplicado instrumentos validados para realizar
las evaluaciones de los procesos metodolgicos y las evaluaciones de las familias.
Keywords: Family
Longitudinal.
competence,
positive
parenting,
socio-educative
intervention,
978-84-695-8363-0
1483
Introduccin
La acumulacin, desde hace ya algunas dcadas, de investigaciones que relacionan las
conductas parentales con el desarrollo social, emocional y psicolgico de los hijos (por
ejemplo, Baumrind, 1971; Kochanska, Murray y Coy, 1997; Lila, Musitu y Buelga, 2001;
Musitu y Garca, 2004; Lila y Gracia, 2005) parece no dejar lugar a dudas acerca de algunas
de las consecuencias de esta relacin: los padres con adecuadas competencias parentales, los
padres afectivos, que responden ante las necesidades de sus hijos, que les permiten participar
activamente en el establecimiento de las normas familiares y que utilizan opciones de
disciplina positiva, consiguen hijos independientes, sociables, cooperativos y que confan en
s mismos. Estas conductas parentales se encuentran relacionadas con altos niveles de ajuste,
competencia psicosocial, autoestima y adaptacin escolar (Martnez, Fuertes, Ramos y
Hernndez, 2003). Por el contrario, las relaciones paterno-filiales en las que predomina la
agresin, el rechazo y en las que no se proporcionan niveles adecuados de afecto y apoyo,
tienden a asociarse con problemas emocionales y conductuales en los hijos, tales como
depresin, conducta agresiva, ansiedad, agresividad y hostilidad (Repetti, Taylor y Seeman,
2002).
La pregunta sobre la eficacia del trabajo preventivo, medido en trminos de cambio
consistente en un conjunto de factores relevantes, responde a una preocupacin de los
tcnicos y de los polticos de la mayora de los programas preventivos. En las investigaciones
del Grupo de Investigacin y Formacin Educativa y Social (GIFES-UIB) sobre la aplicacin
del Programa de Competencia Familiar (Kumpfer, 1998) para poblacin espaola, esa ha sido
una de nuestras preocupaciones. El Programa de Competencia Familiar (PCF) es una
adaptacin del Strengthening Families Program (SFP) (Kumpfer y DeMarsh, 1985; Kumpfer,
DeMarsh y Child, 1989), que es un programa de prevencin de factores de riesgo
multicomponente de tipo selectivo cuyo diseo original fue desarrollado para reducir la
influencia de factores de riesgo familiares en los hijos e hijas de personas drogodependientes,
al mismo tiempo que se refuerzan los factores de proteccin, con la finalidad de aumentar su
resiliencia ante el consumo y otros posibles problemas.
Las aplicaciones realizadas por GIFES se han centrado en programas de prevencin de
drogas, en especial los del Proyecto Hombre en Espaa, as como en los servicios sociales de
atencin primaria y servicios de proteccin de menores. La presente investigacin se centra en
las aplicaciones controladas en los servicios sociales entre 2009 y 2011. El diseo e
investigacin del PCF tiene tres etapas en Espaa:
Experimentacin inicial: 2005. Diseo transversal basado en aplicaciones de 14
sesiones y medidas previas y posteriores.
Aplicaciones generalizadas a servicios de prevencin de drogas, a servicios sociales de
atencin primaria y a servicios de proteccin de menores, a partir de las correcciones
introducidas despus de la experimentacin inicial: 2006-2011. Diseo transversal
basado en aplicaciones de 14 sesiones y medidas previas y posteriores.
Diseo longitudinal: 2011-2013, actualmente en proceso. Se completan los anlisis
realizados con seguimiento a dos aos de las familias participantes. En 2011 se han
tomado datos de las familias que finalizaron en 2009; en 2012 se toman datos de las
978-84-695-8363-0
1484
familias que finalizaron en 2010; en 2013 se tomarn datos de las familias que
finalizaron, en 2011, las ltimas aplicaciones generalizadas.
La adaptacin realizada por GIFES (Orte y GIFES, 2005a, 2005b; Orte, Touza,
Ballester, 2007), ha procurado alcanzar criterios de calidad, de forma que en el PCF se ha
utilizado un diseo de evaluacin pretest-postest con grupos de control, complementado por
medidas de proceso generadas a partir de evaluaciones proceso-resultados. Las evaluaciones
realizadas se han centrado en los resultados y en los procesos desarrollados. En la
investigacin que se presenta aqu se relacionan algunos de los procesos ms destacados con
los resultados obtenidos por las familias. Entre los diversos procesos de aplicacin de un
programa preventivo se han seleccionado los relacionados con la metodologa del enfoque de
competencia familiar que caracteriza al PCF. Por lo que se refiere al cambio observado en los
participantes, se han seleccionado los factores que informan del cambio en el conjunto de las
familias.
En sus orgenes, el concepto de trabajo socioeducativo se aplicaba como una etiqueta
genrica que identificaba la intervencin como doblemente enfocada y poco ms. Con el
tiempo, las intervenciones socioeducativas se han desarrollado como un enfoque mucho ms
sofisticado, incluyendo planteamientos sistmicos y relacionales, en un nivel no clnico. Las
diferencias con las llamadas terapias familiares se ha profundizado, no solo por el enfoque
diferenciado, sino tambin a partir de la formalizacin de los programas de trabajo con
familias, as como por el desarrollo de investigaciones evaluativas muy detalladas.
En el marco del trabajo socioeducativo, y como consecuencia del planteamiento
sistmico y relacional, se han desarrollado las intervenciones socioeducativas con la familia.
Las metodologas aplicadas, influidas inicialmente por planteamientos cognitivo-conductuales
y sistmicos, han permitido un importante avance en los modelos de trabajo basados en la
evidencia emprica. En ese contexto se desarrolla el enfoque de competencia familiar, como
un enfoque no directamente clnico, centrado en el conjunto de la familia y desarrollado
mediante programas escritos, entre los cuales destaca el Strengthening Family Program (SFP),
Programa de Competencia Familiar (PCF) en Espaa (Orte et al., 2008a), estructurado de
acuerdo a los criterios para los programas de intervencin ms eficaces.
Es importante considerar algunos aspectos relacionados con la forma en que se
desarrolla el trabajo socioeducativo en los programas de competencia familiar. Nation et al.
(2003) identifican una serie de criterios de actuacin que deben considerarse en todo trabajo
preventivo, es decir, los criterios generales para las intervenciones orientadas a promover la
competencia en familias vulnerables. Siguiendo a Nation et al. se pueden mostrar las
estrategias del PCF:
1. Enfoque integral: Se trata de un planteamiento de mltiples componentes, orientado a
evitar factores de riesgo y promover factores protectores. Se trabaja con el ncleo
familiar: padres e hijos, con subprogramas para los progenitores, para los hijos y para
el conjunto de la familia.
2. Mtodos de intervencin diversos: Las estrategias incluyen mtodos diversos,
incluyendo metodologas activas, as como el desarrollo de las habilidades. Adems,
se cuida todo el proceso de implementacin: seleccin y motivacin de las familias,
buenos materiales didcticos, preparacin de las salas, etc.
978-84-695-8363-0
1485
978-84-695-8363-0
1486
978-84-695-8363-0
1487
Mtodo
Se ha realizado un diseo cuasi-experimental multigrupo, con medidas pretest y
postest, as como con grupo de control no equiparado. El mismo y riguroso control de las
condiciones experimentales (eliminacin, constancia de las condiciones), permite tratar los
diversos grupos experimentales como un nico grupo con diversas aplicaciones. Los controles
realizados son diversos. Se han eliminado variables perturbadoras diversas (dificultades de
transporte, guardera para los hijos menores, etc.). Se han mantenido constantes las
condiciones experimentales, mediante control directo por parte de miembros del equipo de
investigacin: siempre se aplica con fidelidad el mismo programa, se controla la duracin de
las sesiones, se mantienen constantes las condiciones ambientales de las salas, etc. Se utilizan
los mismos instrumentos en dos tomas de datos realizadas segn el mismo protocolo,
incluyendo a todos los sujetos participantes.
Muestra
El grupo experimental est formado por 217 familias, mientras el grupo de control est
formado por 14 familias. El grupo experimental se ha constituido a partir de 29 aplicaciones
del programa de competencia familiar, realizadas en 17 municipios o zonas de Mallorca entre
2009 y 2011. El ao 2009 se realizaron 11 aplicaciones, finalizando 68 familias todo el
programa. El ao 2010 y 2011 se realizaron 9 aplicaciones diferentes cada ao, completando
el programa 80 y 69 familias respectivamente. En total participaron 656 personas de 292
familias, completando el programa 473 personas de 217 familias. Por lo tanto, abandonaron o
no completaron el nmero mnimo de sesiones para ser evaluadas un 25,68% de las familias y
un 27,90% de los participantes.
La edad media de los 256 padres que completaron el programa era de 40,7 aos (DS=
9,714), mientras que la de los 217 hijos era de 10,44 aos (DS= 1,59). El 55,3% de los hijos
tena entre 7 y 10 aos, el 44,7% tena entre 11 y 14 aos. El 43,8% eran hombres y el 56,2%
mujeres. La edad media de los 20 padres del grupo de control era de 46,14 aos (DS= 12,95),
la de los 14 hijos era de 10,21 aos (DS= 2,119). El 59,4% de los hijos tena entre 7 y 10 aos,
el 40,6% tena entre 11 y 14 aos. El 42,9% eran hombres y el 57,1% mujeres.
En la muestra experimental considerada, las caractersticas de la dinmica familiar han
limitado la participacin de ambos padres. Solo estn presentes ambos padres a lo largo del
programa en un 24,6% de las familias. Las caractersticas del grupo experimental y del grupo
de control eran significativamente similares.
Instrumentos
Los instrumentos especficos para el seguimiento de las sesiones son dos: un registro
de evaluacin de cada una de las 14 sesiones del programa, cumplimentado por los propios
forma- dores bajo la supervisin de un evaluador del equipo GIFES. Un segundo cuestionario,
978-84-695-8363-0
1488
Procedimiento
La observacin de los resultados, tanto en los padres y madres como en los hijos, se
realiza a partir de las comparaciones entre la situacin inicial (pretest) y final (postest) del
grupo experimental, habiendo realizado mediante anlisis de varianza la comparacin con el
grupo de control en cada uno de los factores que se consideran. Las dimensiones de la
muestra, cuando se hacen los clculos de cada aplicacin, limitan el anlisis inferencial de los
resultados, pero la validez de los resultados mejora considerablemente cuando trabajamos con
una muestra ms elevada, como la de las 29 aplicaciones hechas en los servicios sociales;
desde esta perspectiva, se pueden constatar resultados consistentes en una amplia serie de
factores. Para establecer la significacin de los resultados se han considerado de forma ms
destacada las diferencias entre la situacin inicial y final del grupo de padres e hijos que han
completado el programa.
El anlisis de los datos se ha centrado en tres tipos de resultados. En primer lugar, se
identifican los resultados del grupo experimental de 217 familias que completan el programa
aplicado en servicios sociales, siempre partiendo del anlisis comparado con los resultados
obtenidos por el grupo de control. La presentacin, necesariamente se debe hacer de forma
resumida, mostrando los principales factores identificados. En segundo lugar, se analizan los
datos sobre el proceso de aplicacin del programa en el conjunto de sus 29 aplicaciones. Se
diferencia entre los resultados de los principales componentes de la metodologa utilizada y
los resultados de la evaluacin de la fidelidad al programa original (Orte, Touza, Ballester,
2007). Los primeros cuatro indicadores se refieren a los autoinformes realizados por los
propios formadores. Dichos informes se realizan en las 14 sesiones del programa. Los cuatro
indicadores siguientes tratan sobre la evaluacin de la fidelidad, realizada con observadores
externos, en la aplicacin del programa. Para cada indicador, se analiza la relacin entre la
calidad de la metodologa y la fidelidad con los resultados obtenidos. En dicha relacin, se ha
tenido en cuenta el nivel de problemtica familiar como una variable mediadora, controlando
los efectos de dicha problemtica en la relacin que se analiza.
Resultados
A continuacin se presentan, de forma resumida, los resultados familiares de las 29
aplicaciones agregadas realizadas en los servicios sociales. No se presentan de forma
diferenciada los resultados de los hijos, dado que el anlisis se centra en las hiptesis
978-84-695-8363-0
1489
978-84-695-8363-0
1490
978-84-695-8363-0
1491
Discusin
Entre las limitaciones de nuestro estudio se podra hacer referencia, en primer lugar, a
la potencial influencia de la deseabilidad social en las respuestas emitidas por padres y
madres, as como por los hijos e hijas. Las triangulacin de las evaluaciones de los diversos
informantes aportan un cierto control de los cambios, sin embargo, todos los cuestionarios
basados en autodeclaraciones realizadas a los sujetos que han participado en los programas
formativos tienen este riesgo. La segunda limitacin se observa en la autoevaluacin por parte
de los formadores sobre la calidad y resultados en las sesiones de su actuacin. Dicha
limitacin se intenta controlar con las evaluaciones externas en una serie de sesiones clave.
El Programa de Competencia Familiar demuestra obtener buenos resultados,
consistentes y de buena calidad, con familias en diversas situaciones de dificultad. La mayora
de los cambios, identificados a partir de los seis factores considerados, son relevantes para la
mayora de las familias, obteniendo mejores resultados (potencia de los efectos) en los
factores que se basan en procesos de aprendizaje de elaboracin menos compleja (mejora de
la comunicacin y de las habilidades parentales). Los resultados de la evaluacin de los
procesos de intervencin de los formadores tambin son positivos. No se encuentran
diferencias significativas entre las autoevaluaciones de la actividad y las evaluaciones
externas sobre la fidelidad y los efectos observados en las dinmicas de los grupos.
Las condiciones sociales de las familias (patrones educativos familiares, nivel
cultural), as como la dinmica familiar ms amplia (familia extensa; parejas que no asisten a
las sesiones, en los casos de divorcio, etc.) pueden limitar o potenciar algunos de los cambios
978-84-695-8363-0
1492
Referencias
Barraca, J. y Lpez-Yarto, L. (2003). ESFA. Escala de Satisfaccin Familiar por Adjetivos.
Madrid: TEA Ediciones.
Baumrind, D. (1971). Current patterns of parental authority. Developmental Psychology
Monographs, 41, 1-103.
Collins, D., Jordan, C. & Coleman, H. (2010). An introduction to family social work.
Belmont, USA: Brooks/Cole.
Kaplan, L. & Girard, J.L. (1994). Strengthening high-risk families: A handbook for
practicioners. New York: Lexington Books.
Kochanska, G., Murray, K., & Coy, K. (1997). Inhibitory control as a contributor to
conscience in childhood: From todd-ler to early school age. Child Development, 68,
978-84-695-8363-0
1493
173-186.
Kumpfer, K. L., Alvarado, R., Smith, P. & Bellamy, N. (2002). Cultural sensitivity in
universal family-based prevention interventions. Prevention Science, 3(3), 241-244.
Kumpfer, K. L., Demarsh, J. P., & Child, W. (1989). Strengthening families program:
Childrens skills training curriculum manual (Prevention services to children of
substance-abusing Parents). Utah: Social Research Institute, Graduate School of
Social Work, University of Utah.
Kumpfer, K.L, & Alvarado, R. (2003). Family strengthening approaches for the prevention of
youth problem behaviors. American Psychologist, 58(6/7), 457-465.
Kumpfer, K.L. (1998). Selective prevention interventions: The strengthening families
program. In R.S. Ashery, E.B. Robertson y K.L. Kumpfer (Eds.), Drug abuse
prevention through family interventions (NIDA Research Monograph No. 177. NIH
Publication No. 99-4135). Washington DC: U.S. Government Priting Office.
Kumpfer, K.L., & Demarsh, J. (1985). Genetic and family environmental influences on
children of drug abusers. Journal of Children in Contemporary Society, 3/4.
Kumpfer, K.L., Pinyuchon, M., de Melo, A., & Whiteside, H. (2008). Cultural adaptation
process for international dissemination of the Strengthening Families Program (SFP).
Evaluation and Health Professions, 3(2), 226-239.
Lila, M., Musitu, G., y Buelga, S. (2001). Adolescentes colombianos y espaoles: diferencias,
similitudes y relaciones entre la socializacin familiar, la autoestima y los valores.
Revista Latinoamericana de Psicologa, 32, 301-319.
Lila, M., y Gracia, E. (2005). Determinantes de la aceptacin-rechazo parental. Psicothema,
17, 107-111.
Martnez, J., Fuertes, A., Ramos, M., & Hernndez, A. (2003). Substance use in adolescence:
Importance of parental warmth and supervision. Psicothema, 15, 161-166.
Musitu, G., y Garca, F. (2004). Consecuencias de la socializacin familiar en la cultura
espaola. Psicothema, 16, 288- 293.
Nation, M., Kumpfer, K.L., Crusto, C.A., Wandersman, A., Seybolt, D. Morrissey-Kane, E. &
Davino, K. (2003). What works in prevention: Principles of effective prevention
programs. American Psychologist, 58(6/7), 449-456.
Orte, C., March, M.X., Ballester, L., Touza, C., Fernndez, C. y Oliver, J.L. (2008a).
Programa de Competencia Familiar (PCF). Manual de implementacin del Programa
de Competencia Familiar (PCF). Palma: UIB.
Orte, C., Touza, C., y Ballester, L. (2007). Anlisis del grado de fidelidad en la ejecucin de
un programa de competencia familiar. Pedagoga Social. Revista Interuniversitaria, 4,
95-103.
978-84-695-8363-0
1494
Orte, C., y GIFES. (2005a). Los programas de prevencin de drogas centrados en la familia:
una visin desde la investigacin y la prctica. Revista Proyecto, 53, 14-17.
Orte, C., y GIFES. (2005b). Una investigacin educativa sobre un programa de competencia
familiar. En M. March, Anuari de lEducaci de les Illes Balears (pp. 284-295).
Palma: Fundaci Guillem Cifre de Colonya.
Pittman, F. (1987). Turning points: Treating families in transition and crisis. Nueva York:
Norton.
Repetti, R., Taylor, S., & Seeman, T. (2002). Risky families: Family social environments and
the mental and physical health of offspring. Psychological Bulletin, 128, 330-366.
Reynolds, C., & Kamphaus, R. (2004). BASC. Sistema de evaluacin de la conducta de nios
y adolescentes. Madrid: TEA ediciones.
Saleebey, D. (1997). The strengths perspectives in social work. Nueva York: Longman.
978-84-695-8363-0
1495
Resumen
La diversidad de agentes y de la informacin que proporcionan al evaluar los aprendizajes
de los estudiantes en Prcticas Externas conlleva que las estrategias para recoger
informacin sean diferentes. En una investigacin evaluativa sobre prcticas externas se
busca identificar buenas prcticas y establecer las bases para lograr una aplicacin eficaz en
los ttulos de grado analizando los instrumentos utilizados. Se presentan los resultados de dos
objetivos: conocer los instrumentos empleados para evaluar los aprendizajes del alumnado y
obtener informacin sobre los trabajos que deben completar. Se han enviado encuestas a
coordinadores, tutores acadmicos, tutores externos y estudiantes de los ttulos de todas las
universidades espaolas con prcticas externas. Se utilizan cuestionarios y entrevistas por los
tutores externos, reuniones y visitas por los tutores acadmicos y las memorias segn los
estudiantes. No se cruza informacin y los contactos entre agentes no estn sistematizados, lo
que produce escasa transparencia para los estudiantes.
978-84-695-8363-0
1496
Introduccin
La universidad espaola tiene establecido, entre otros, que uno de sus objetivos
preferenciales en materia de programas formativos, recogido ya desde el Real Decreto
1497/1981, de 19 de junio, sobre Programas de Cooperacin Educativa, y actualizado en el
Real Decreto 1707/2011, de 18 de noviembre, por el que se regulan las Prcticas Acadmicas
Externas de los estudiantes universitarios, que deroga el anterior, es mejorar los programas de
prcticas externas de los ttulos de la educacin superior. Son mltiples las perspectivas y
concepciones que se encuentran recogidas en la revisin bibliogrfica (Zabalza, 2006, 2011;
Garca Delgado, 2009; Garca Manjn, 2009; etc.) pero nosotros entendemos por prcticas
externas aquellas actuaciones formativas que los estudiantes desarrollan en un contexto
natural relacionado con el ejercicio de una profesin (Garca Jimnez, 2006), que tienen
reconocido y asignado un determinado nmero de crditos y se desarrollan fuera del mbito
acadmico para que el estudiante contacte con un contexto profesional real con la finalidad de
poner en accin las competencias adquiridas en el mbito acadmico (Burguera, 2012).
Para alcanzar el objetivo de mejora de los programas de prcticas externas la
universidad se ha ido dotando de mecanismos de evaluacin interna (De Miguel, 2003;
Tejada, 2005) que permiten disponer de evidencias para mejorar los procesos evaluativos de
estas acciones formativas, paso previo a las acciones encaminadas a la mejora de las mismas.
En este proceso los diferentes agentes implicados en las prcticas externas, los coordinadores
de los ttulos en cuyos planes de estudio se encuentran recogidas prcticas externas con
reconocimiento acadmico de crditos, supervisores definitivos de las prcticas, los tutores
acadmicos, los tutores de los centros, empresas e instituciones externas a la universidad, y
los propios estudiantes, destinatarios principales y definitivos de las mismas, desempean un
rol decisivo como agentes responsables, entre otros aspectos, del diseo, desarrollo y
evaluacin de estas actividades formativas, y en concreto de los aprendizajes adquiridos por
los estudiantes durante la realizacin de las prcticas..
En este escenario, en el contexto de una investigacin ms amplia, presentamos la
informacin que los diferentes agentes implicados en las prcticas externas han aportado
sobre los instrumentos y estrategias utilizados por todos ellos en la recogida de informacin
pertinente para evaluar los aprendizajes alcanzados por los estudiantes durante el perodo de
realizacin de las prcticas, adems de tratar de identificar cules son los productos que debe
elaborar y entregar el alumnado al final del perodo de prcticas, entendidos como elementos
constitutivos para la emisin del juicio sobre los aprendizajes logrados por los estudiantes en
ese perodo formativo.
Por lo tanto, los objetivos que se pretenden alcanzar con este trabajo se concretan en
los siguientes trminos:
1. Conocer cules son, segn los agentes implicados en las prcticas externas, los
instrumentos y estrategias que utilizan en las mismas para obtener informacin
relevante que permita evaluar los aprendizajes alcanzados por los estudiantes en el
perodo de prcticas externas.
978-84-695-8363-0
1497
2. Obtener informacin pertinente sobre los trabajos que los estudiantes tienen que
realizar durante las prcticas y al final de las mismas como elementos fundamentales
para evaluar los aprendizajes alcanzados.
Para la recogida de informacin se han diseado cuestionarios ad hoc para cada uno
de los diferentes tipos de agentes informantes. El instrumento para la obtencin de la
informacin est compuesto por varios bloques: identificacin de los sujetos, elementos
constitutivos de la gua docente de prcticas, objetivos de las prcticas externas, los centros de
prcticas, criterios y estrategias para la evaluacin de los aprendizajes de los estudiantes en
prcticas, tareas y funciones a desempear por los tutores, elementos para la mejora de las
prcticas y sistema de garanta de calidad de las prcticas externas. En este trabajo
presentamos, analizamos y se someten a discusin los resultados del bloque relativo a la
evaluacin de los aprendizajes de los estudiantes, teniendo como objetivo conocer si se
utilizan como instrumentos de recogida de informacin sobre los aprendizajes de los
estudiantes los cuestionarios, las entrevistas, etc., si el alumnado tiene que elaborar o no una
memoria final de prcticas, si se utiliza algn procedimiento o protocolo para la
autoevaluacin, si se controla la asistencia de los estudiantes a los centros de prcticas, o si se
emplean otras estrategias. Esta ltima opcin ofrece la posibilidad, a travs de un espacio
abierto, de que los informantes indiquen qu otras opciones son empleadas para recoger esa
informacin. Todas las preguntas presentan la opcin de respuesta binaria si/no.
A partir de la informacin obtenida se han realizado los correspondientes anlisis
descriptivos de frecuencias y porcentajes, que se presentan en tablas y diagramas de barras.
Adems, para profundizar en el anlisis de datos, se ha realizado el anlisis inferencial
pertinente para conocer si las respuestas proporcionadas por los agentes se distribuyen de
igual manera en las opciones afirmativa y negativa en cada tem mediante la prueba no
paramtrica binomial, y adems se han estudiado las diferencias entre los porcentajes de
respuesta afirmativa entre los diferentes tems utilizando la prueba no paramtrica de
McNemar.
Mtodo
La informacin se ha obtenido a travs de un cuestionario enviado a los diferentes
agentes informantes: coordinadores de prcticas en los ttulos, tutores acadmicos, tutores
externos y estudiantes. Los cuestionarios han sido remitidos a todos los ttulos de todas las
universidades espaolas, pblicas y privadas, que tienen la asignatura de prcticas externas en
sus planes de estudio. La informacin se ha recogido fundamentalmente a travs de correo
postal y, en menor proporcin, mediante correo electrnico. El cuestionario lo han devuelto
contestado un total de 178 coordinadores de prcticas que representan a 321 ttulos y menor
medida los tutores acadmicos, los tutores externos y los estudiantes. El 85,7% son
coordinadores de ttulos impartidos en universidades pblicas; un porcentaje superior al 20%
tienen una experiencia que oscila entre 3 y 5 aos, y el 42% supera los 5 aos desempeando
estas tareas; ms del 74% son coordinadores de ttulos de Ciencias Sociales y Jurdicas y el
23% lo son de titulaciones de Ciencias de la Salud. El contenido de las respuestas
proporcionadas por los agentes informan ha sido analizado mediante el paquete de programas
IBM-SPSS (v.19), previa adecuacin y codificacin del mismo.
Resultados
Los principales resultados se muestran en las siguientes grficas y tablas.
978-84-695-8363-0
1498
C-TA
Sig.
C-TP
Sig.
TA-TP
Sig.
Cuestionarios
0,073
0,000
0,006
Entrevistas
0,000
0,000
0,001
Memoria
0,000
0,002
0,000
Control de asistencia
0,000
0,000
0,000
Autoevaluacin
0,000
0,000
0,000
Otros
0,000
0,001
0,081
978-84-695-8363-0
1499
Control de
asistencia
Memoria
Entrevist.
Autoeval.
Cuestiona.
90,0
89,5
73,7
60,0
52,6
1,000
0,375
0,070
0,109
0,375
0,070
0,065
0,549
0,289
1,000
978-84-695-8363-0
1500
Tabla 3
Comparacin entre porcentajes de respuesta de los tutores externos sobre las estrategias
utilizadas por ellos mismos para obtener informacin para evaluar aprendizajes de los estudiantes.
Porcentaje de respuesta afirmativa. Significacin de la prueba de McNemar
%
Control de
asistencia
Memoria
Entrevistas
Autoevaluacin
Cuestionarios
Control de
asistencia
Memoria
Entrevist.
Autoeval.
Cuestiona.
92,5
85,4
70,0
61,3
38,9
0,453
0,012
0,012
0,000
0,109
0,092
0,000
0,754
0,041
0,143
Del mismo modo, la Grfica 4 y la Tabla 4, recogen la informacin que sobre estas
estrategias de evaluacin aportan los estudiantes.
Grfica 4. Porcentaje de respuesta afirmativa de los estudiantes sobre los instrumentos y estrategias
que, segn ellos mismos, utilizan los agentes
Tabla 4
Significacin de la prueba de McNemar
C-TA
C-TP
Sig.
Sig.
Sig.
Cuestionarios
0,754
0,607
1,000
Entrevistas
0,000
0,008
0,388
Memoria
0,000
0,549
0,012
Control de asistencia
0,008
0,000
0,022
Autoevaluacin
0,388
1,000
0,227
Otros
1,000
1,000
1,000
Item
TA-TP
Discusin
La mayora de los coordinadores de prcticas externas indican en sus respuestas que
ellos no utilizan ninguna de las estrategias o instrumentos propuestos en los cuestionarios para
recoger informacin susceptible de ser empleada para evaluar los aprendizajes adquiridos por
978-84-695-8363-0
1501
los estudiantes mientras realizan las prcticas externas. Esto se debe a que no son ellos, sino
los tutores acadmicos, los agentes responsables directos de evaluar al alumnado.
Los estudiantes manifiestan, coincidiendo con los coordinadores, que estos ltimos no
recurren a ninguno de esos instrumentos ni estrategias para evaluar los aprendizajes que
adquieren durante las prcticas.
Las estrategias que emplean los tutores acadmicos son, en concordancia con lo
respondido por los coordinadores, mayoritariamente, el informe o memoria final de prcticas
que tienen que redactar los estudiantes y las entrevistas que han mantenido a lo largo del
perodo de prcticas stos con los tutores acadmicos en el mbito estrictamente acadmico.
Adems, indican que apenas se emplean cuestionarios ni estrategias para la autoevaluacin.
Los tutores acadmicos manifiestan adems que se basan en el informe final y en la asistencia
a los centros, empresas e instituciones de prcticas para realizar la evaluacin y muy
circunstancialmente se utiliza el recurso de la entrevista con el estudiante. La estrategia ms
frecuentemente utilizada por los tutores externos es la asistencia del estudiante al centro de
prcticas, coincidiendo con lo que afirman los coordinadores. Los tutores externos muestran
que tambin emplean el control de asistencia como estrategia principal para emitir un juicio
positivo del estudiante en prcticas, seguido del informe o memoria final de prcticas y de las
entrevistas en el centro de prcticas. Los estudiantes confirman lo relativo al control de
asistencia pero no as lo que hace referencia a la memoria final. Adems, todos los agentes
informantes indican que el informe final de prcticas es principalmente el producto que tienen
que entregar los estudiantes, aunque hay una gran cantidad de coordinadores que aaden que
tambin realizan trabajos e informes durante el perodo de prcticas, aunque los tutores
acadmicos, los tutores externos y los estudiantes coinciden en sealar que esos trabajos no
alcanzan demasiada importancia en la evaluacin de los aprendizajes. Los coordinadores, sin
embargo, exponen que tambin se emplean pruebas de valoracin inicial y final, seminarios,
reuniones de tutora, elaboracin y resolucin de historias y casos clnicos, portafolios, visitas
peridicas a los centros e instituciones de prcticas y sesiones de evaluacin con los
miembros de la comisin de prcticas del ttulo.
A partir de los resultados alcanzados puede realizarse la siguiente sntesis:
1. Los agentes informantes, tanto internos como externos, tienen diferentes puntos de
vista sobre las herramientas y estrategias, los criterios y los procesos a emplear para
evaluar los aprendizajes que los estudiantes alcanzan durante el perodo de prcticas
externas.
2. Existe una amplia variedad de herramientas utilizadas para recoger informacin que
permita evaluar los aprendizajes de los estudiantes en las prcticas externas. Los
coordinadores y los estudiantes coinciden en sealar que los tutores acadmicos se
basan, fundamentalmente, en la memoria final de prcticas para evaluar los
aprendizajes del alumnado, mientras que los tutores externos y los acadmicos
destacan que el control de asistencia tiene una gran importancia en la evaluacin final.
3. Los tutores externos no siguen las pautas que desde la universidad se establecen en la
gua docente de prcticas externas para la evaluacin de los aprendizajes alcanzados
por los estudiantes durante ese perodo formativo. La razn se encuentra en que no
comparten la misma perspectiva o carecen de informacin pertinente sobre los
procesos a seguir en el terreno acadmico. Los tutores acadmicos recurren a la
978-84-695-8363-0
1502
memoria final de prcticas elaborada por los estudiantes y a la evaluacin remitida por
los tutores externos sobre el trabajo desempeado por los estudiantes en la institucin
que les acoge para desarrollar las prcticas externas.
4. Las diferencias entre la perspectiva de los tutores externos y los acadmicos puede
estar basada en las diferentes visiones que, a su vez, tienen sobre los objetivos y
finalidad de las prcticas externas. Las respuestas emitidas por los tutores acadmicos
y externos y las opiniones y valoraciones proporcionadas por los coordinadores de las
prcticas externas revelan ciertas deficiencias en aspectos formativos relativos a la
evaluacin de los aprendizajes.
En conclusin, a partir de los resultados alcanzados cabe resaltar, en primer lugar, que
los agentes internos y externos mantienen posiciones diferentes en relacin a los criterios y
procedimientos de evaluacin de los aprendizajes de los estudiantes universitarios en las
prcticas externas y, en segundo lugar, que esos criterios de evaluacin de aprendizajes no
estn unificados. Estas afirmaciones reflejan la variedad de instrumentos empleados,
consecuencia, tanto de la variedad de prcticas como de la falta de conocimiento de la
prctica evaluativa, que pone de manifiesto la conveniencia de que los centros de educacin
superior impulsaran acciones formativas dirigidas a tutores externos e internos que orientaran
la evaluacin de una materia con las peculiaridades que presentan las prcticas externas.
Referencias
Burguera, J. (2012). Las prcticas externas en la educacin superior. Bases para el diseo de
un protocolo de evaluacin. (Tesis doctoral no publicada). Universidad de Oviedo.
De Miguel, M. (2006) (Coord.). Metodologas de enseanza y aprendizaje para el desarrollo
de competencias. Madrid: Alianza.
De Miguel, M. (Coord.) (2003). Evaluacin de la calidad de las titulaciones universitarias.
Gua metodolgica. Madrid: MECD.
Garca Delgado, J. (2009). Bolonia y la buena prctica de las prcticas. La Cuestin
Universitaria, 5, 82-90.
Garca Jimnez, E. (2006). Prcticas externas. En M. De Miguel (Coord.), Metodologas de
enseanza y aprendizaje para el desarrollo de competencias. Madrid: Alianza.
Garca Manjn, J.V. (2008). Los nuevos modelos educativos: adquisicin competencial,
empleabilidad y entornos prcticos de trabajo. En I. Rodrguez Escanciano (Ed.), El
nuevo perfil del profesor universitario en el EEES: claves para la renovacin
metodolgica. Valladolid: Servicio Publicaciones Universidad Europea Miguel de
Cervantes.
Tejada, J. (2005). El trabajo por competencias en el practicum: cmo organizarlo y cmo
evaluarlo. Revista Electrnica de Investigacin Educativa, 7(2). Disponible en
<http://redie.uabc.mx/vo7no2/contenido-tejada.html. pp. 1-31>. Fecha de consulta
12/10/2012.
978-84-695-8363-0
1503
978-84-695-8363-0
1504
Resumen
La presente comunicacin expone el proceso de investigacin seguido en un estudio sobre el
grado de satisfaccin de estudiantes de ltimo curso de educacin que participan en un
proyecto de Aprendizaje y Servicio orientado por la metodologa DEL Directed Experiential
Learning, en la Leeds Metropolitan Universiy (Leeds, Gran Bretaa). El proceso de
investigacin que se presenta consiste en un estudio diagnstico-comprensivo con 40
estudiantes, donde- a partir del modelo terico de satisfaccin con el que se trabaja- se
analizan 4 dimensiones clave (conocimiento e intencionalidad atribuida, valoracin de la
utilidad atribuida, valoracin del proceso y proyeccin social). Entre los resultados
preliminares obtenidos, destaca el alto grado de satisfaccin del estudiantado participante,
principalmente porque perciben que han adquirido unos aprendizajes conceptuales,
metodolgicos y ciudadanos a partir de su colaboracin en entidades sociales y educativas.
Descriptores: Aprendizaje y servicio, Aprendizaje experiencial, Estudio diagnsticocomprensivo, Educacin superior, Leeds (Reino Unido).
Abstract
This communication will be presenting the research process about the satisfaction level of
final-year undergraduate students at Leeds Metropolitan University in the United Kingdom
students who participated in a service-learning oriented project referred to as Directed
Experiential Learning (DEL). The research process presented here consisted of a
comprehensive diagnosis study of 40 students, where -from the model of satisfaction with
which we worked- we analyzed 4 key dimensions (attributed knowledge and intentionality,
evaluation of its usefulness, evaluation of the process and social impact). Among the parcial
results is the high degree of satisfaction of students participating mainly due to their
perception of having obtained conceptual and methodological learnings and citizenship
through their collaboration with social and educational institutions.
978-84-695-8363-0
1505
Introduccin
En esta comunicacin se presenta el proceso de investigacin seguido en un estudio
sobre el grado de satisfaccin de estudiantes de ltimo curso de educacin, que participan en
un proyecto de Aprendizaje y Servicio orientado por la metodologia DEL Directed
Experiential Learning, en laLeeds Metropolitan Universiy (Leeds, Gran Bretaa).
La metodologa DEL (Murphy, 2012) busca introducir a los estudiantes en la
investigacin dentro de su campo profesional invitndoles a participar activamente en
asociaciones y entidades educativas. El aprendizaje en el proyecto parte de un enfoque
experiencial y contructivista basado en el reconocimiento de las experiencias previas del
aprendizaje de los estudiantes. Siguiendo la tradicin de Dewey (1938), tambin busca
ampliar los parmetros del aprendizaje ms all del contexto formal. Asimismo, todo el
proceso que se sigue en el proyecto DEL parte del concepto de problematizacin de Freire
donde se entiende la educacin como aquello que "se basa en la creatividad y estimula la
verdadera reflexin y la accin sobre la realidad, dando as respuesta a la vocacin de las
personas como seres que son autnticos slo cuando participan en la investigacin y la
transformacin creativa"(1970, 1996, p. 65). En el proyecto DEL50 los estudiantes son
percibidos y reconocidos como profesionales que pueden hacer una contribucin valiosa
dentro de sus reas.
Sobre el constructo de satisfaccin, en el estudio se parte de un concepto
multidimensional de satisfaccin propuesto por Cabrera, Donoso, Del Campo y Pi (2010) que
incluye componentes objetivos y subjetivos. En base a su propuesta, se realizan adaptaciones
que tienen que ver con las caractersticas que definen la metodologa de APS.
A) Componentes objetivos
Ambos aspectos nos ubican en un plano que se ha venido a denominar objetivo por el
carcter externo de la informacin recopilada. sta nos permite contextualizar los procesos
posteriores de elaboracin subjetiva a travs de los cuales se estructuran los significados
atribuidos.
B) Componentes subjetivos: atribucin de significados
50
En el proyecto cada estudiante debe identificar un problema en la asociacin o entidad en la que participa y
durante tres semanas debe explorar e investigar sobre la problemtica identificada.
978-84-695-8363-0
1506
Valoracin del proceso: Este componente se refiere al nivel de implicacin que los
estudiantes tienen hacia el proyecto, la relacin entre la teora y la prctica que ha
generado la propia dinmica, y la reflexin y la evaluacin que hacen durante el
proceso.
En la siguiente tabla se recogen los diferentes componentes que son, a su vez, las
dimensiones de anlisis del estudio 51, con sus correspondientes subdimensiones.
Tabla 1.
Relacin de dimensiones y subdimensiones de anlisis (Folgueiras, Luna y Puig (en prensa)
Conocimiento e intencionalidad atribuida
Proyeccin social
Metodologa y objetivos
La investigacin constituye un estudio diagnstico-comprensivo que persigue los siguientes
objetivos.
Valorar el grado de satisfaccin de estudiantes que participan en el proyecto DEL
Aportar orientaciones para la mejora del proyecto DEL
Para conseguir estos objetivos, la investigacin se organiza en las siguientes fases:
Primera fase. Elaboracin metodolgica y conceptual. En su elaboracin se parte del
trabajo realizado por Folgueiras (coord.) (2011)52; se utiliza el mismo marco terico y
metodolgico, adaptndolo al nuevo contexto de la investigacin; la Leeds
Metropolitan University (setiembre-noviembre 2012).
51
Los componentes objetivos nos sirven para contextualizar el proyecto y relacionar los resultados de cada una
de las dimensiones de anlisis con dicha contextualizacin.
52
El estudio que presentamos es una rplica de la investigacin realizada por Folgueiras, Cabrera, Luna y Pui g
(2011). La investigacin ha sido financiada por la AGAUR (Generalitat de Catalunya), para realizar el trabajo
de campo se realiz una estancia de 3 meses y medio en la Leeds Metropolitan Universiy.
978-84-695-8363-0
1507
Muestra e informantes
La muestra del estudio est formada por los 40 estudiantes que participan en el
proyecto DEL durante el curso acadmico 2012-2013. El proyecto dura un ao acadmico e
incluye dos mdulos: 1) "Problemas educativos actuales" y 2) "las inversiones en
educacin54.
Los informantes de la investigacin son los estudiantes, el profesorado y los
coordinadores de las entidades colaboradoras.
53
Durante el mes de junio se realizar una jornada de devolucin del primer anlisis con los informantes de la
investigacin.
54
Una sntesis del proyecto DEL la encontramos en Murphy (2012).
978-84-695-8363-0
Tabla 2.
Relacin de tcnicas e informantes
Tcnicas Cuestionario
Entrevistas
Informantes
Estudiantes
Profesorado
Coordinadores
entidades
Documentos:
trabajos
estudiantes
x
x
1508
Anlisis
documental
x
x
x
x
Referencias
Cabrera, F., Donoso, T., Aneas, A. Del Campo, J. Y Pi, A. (2010). Valoracin de la
satisfaccin de usuarios de programas sociales: propuesta de un modelo de anlisis.
Revista de Educacin, 351, 311-336.
Dewey, J. (1938). Experience and Education. Toronto: Collier-MacMillan Canada Ltd.
55
En el momento de presentar esta comunicacin, estamos iniciando el anlisis de los datos cuatliativos. No se
incluye ninguno de los datos cuantitativos porque la recogida de informacin con respecto a esta tcnica finaliza
el mes de mayo.
978-84-695-8363-0
1509
Folgueiras, P., Luna, E. y Puig, G. (en prensa). Aprendizaje y Servicio. Estudio del grado de
satisfaccin en estudiantes universitarios. Revista de educacin.
Folgueiras, P. (Coord.), Cabrera, F., Luna, E. y Puig-Latorre, G. (2011) Projecte destudi
sobre lavaluaci de limpacte (grau de satisfacci i xarxa territorial) dels projectes
daprenentatge servei. Disponible en: http://www.ub.edu/aps/recerca/ (Consulta.
Abril 2013).
Freire, P. (1969). Pedagoga del oprimido. Editorial Tierra Nueva y Siglo XXI Argentina
Editores.
Murphy, T. (2012). Directed Experiential Learning and Emerging Educational Professionals: The
Demands for an Ethical, Constructivist, Qualitative Research Casing (pp. 101-122). In:
Cotton, T. (Ed.): Towards an Education for Social Justice: Ethics Applied to Education. Bern,
Peter Lang International Academic Publishers.
978-84-695-8363-0
1510
Sex:.....
..................................
Do you work:
in permanent employment
in temporary employment
I dont work
No
1. Briefly explain the Directed Experiential Project (DEL) that you participated in
.......................................................................................................................................................................
........
.......................................................................................................................................................................
........
2. In the course of this academic year did you have the opportunity to participate in any other projects
similar to the one that you participated in for this module?
Yes
No
3. In previous academic years did you have the opportunity to participate in any similar type projects?
Yes
No
4. Why do you think your tutors offered you the opportunity to participate in a DEL type project?
.......................................................................................................................................................................
.......................................................................................................................................................................
.......................................................................................................................................................................
......................
5. As part of DEL, did you have opportunities to engage with organizations outside the university? If yes,
could you briefly elaborate.
.......................................................................................................................................................................
.......................................................................................................................................................................
.......................................................................................................................................................................
.......................
6. Who decided which organizations you went to?
Self
Tutors
Placement Office
Others (specify):.....................................................
978-84-695-8363-0
1511
7. Was the DEL process for this module concerned with social issues e.g. educational disadvantage, equal
educational opportunities etc.?
Not at all
A little
In some ways
Quite a bit
A Lot
8. Do you believe that the organization benefitted from your participation?
Not at all
A little
In some ways
Quite a bit
A lot
9. Was your overall experience of DEL beneficial?
Not at all
A little
In some ways
Fairly beneficial
Very beneficial
10. Evaluate to what extent the project has been useful for:
Please mark with an X on the most appropriate number for each statement which
corresponds most closely to your desired response (1. Strongly disagree 2. Disagree 3.
Neither agree nor disagree 4. Agree 5. Strongly agree
Getting to know associations, organizations, community groups
11. Evaluating the extent to which the Directed Experiential Learning (DEL) process have been successful
in:
Please mark with an X at the most appropriate number of each statement which corresponds
most closely to your desired response (1. Strongly disagree 2. Disagree 3. Neither agree nor
disagree 4. Agree 5. Strongly agree
Involving the students in an engaging learning opportunity
Increasing the students awareness of the potential learning opportunities involved in
Directed Experiential type learning
Promoting the value and potential benefits of collaborative working opportunities amongst
students
Providing opportunities for deep-learning on module content
Making the students more aware of their roles and responsibilities as social actors
978-84-695-8363-0
1512
12. Evaluate to what extent the overall anticipated outcomes of the DEL process have been successful in :
Please mark with an X at the most appropriate number of each statement which
corresponds most closely to your desired response (1. Strongly disagree 2. Disagree 3.
Neither agree nor disagree 4. Agree 5. Strongly agree
13. The following aspects of the DEL process were appropriate/successful in their intended outcomes:
Please mark with an X the most appropriate number of each statement which corresponds
most closely to your desired response (1. Strongly disagree 2. Disagree 3. Neither agree nor
disagree 4. Agree 5. Strongly agree
14. Evaluate to what extent the following people were aware of your involvement in DEL.
Please mark with an X the most appropriate number of each statement which corresponds
most closely to your desired response (1. Strongly disagree 2. Disagree 3. Neither agree nor
disagree 4. Agree 5. Strongly agree
Your family
Your friends
Other students on your course
Other tutors on your course
The School Leadership Team (ITE coordinator, HoS, dean etc.)
15. Evaluate to what the extent your DEL project was of interest to the following persons:
Please mark with an X the most appropriate number of each statement which corresponds
most closely to your desired response (1. Strongly disagree 2. Disagree 3. Neither agree nor
disagree 4. Agree 5. Strongly agree
Your family
Your friends
Other students on your course
Other tutors on your course
The School Leadership Team (ITE coordinator, HoS, dean etc.)
16. Evaluate to what extent you would like to participate in any organisation, association, etc. in the future?
Not at all
Rarely
978-84-695-8363-0
1513
Occasionally
Frequently
Often
17. How would you rate your level of participation in the Directed Experiential Learning (DEL) process:
I have participated and got involved very much in the project
I have participated moderately but I could have participated more.
I believe my participation was sufficient
I have almost not participated
I have not participated at all
18. If the opportunity presented itself, would you like to become involved in a similar type project:
Yes, of course
Yes, but Im not 100% sure
I dont know, it depends
Maybe, but Im not 100% sure
No, probably not
19. Evaluate to what extent you would recommend participation in a DEL learning opportunity to your
friends and colleagues:
Not at all
Rarely
Occasionally
Frequently
Often
aspects
of
the
DEL
process
do
you
think
could
be
improved?
20. Which
.......................................................................................................................................................................
.......................................................................................................................................................................
.......................................................................................................................................................................
.......................................................................................................................................................................
.......................................................................................................................................................................
.......................................
21. What have been the most positive points for you by participating in the project?
.......................................................................................................................................................................
.......................................................................................................................................................................
.......................................................................................................................................................................
.......................................................................................................................................................................
.......................................................................................................................................................................
........................................
IDENTIFICATION DATES:
INTERVIEW CODE:
INTERVIEWED PERSON:
978-84-695-8363-0
1514
INTERVIEW DATE:
HOW LONG HAVE YOU BEEN STUDYNG IN THE FACULTY?:
WHEN DID YOU START TO PARTICIPATE IN THE DEL PROJECT?:
ARE YOU PARTICIPATING IN OTHER PROJECTS SIMILIAR TO DEL PROJECT?:
HAVE YOU PREVIOUSLY PARTICIPATED IN OTHER PROJECTS SIMILIAR TO DEL
PROJECT?:
WHAT IS THE ROLE THAT YOU CONTRIBUTE TO THE OVERALL PROJECT?:
QUESTIONS:
Could you briefly describe the DEL project (learning opportunity) that you engaged for the combined
Current Educational Issues and Effective Educational Placement modules?
What topic areas (educational issues) did you elect to engage with for DEL?
How did your placement experience help you to better understand the chosen area that you choose to
explore?
Did your participation in the DEL project help you to develop and extend your thinking and
understanding about your chosen areas of interest?
Did the DEL process invite you to be a more engaged and more enthusiastic learner?
Did the DEL project invite you to be more or less interested in your chosen area of interest in
education?
Did you have necessary supports available to you in order to get the most for the DEL learning
opportunity?
Did you talk about the project that you did with other people? (|friends, family,)
Are there any changes that you could propose in order to enhance the potential effectiveness of DEL in
terms of meeting its intended outcomes?
Could you describe how you interacted with the fellow students that you engaged with as part of DEL?
Was the collaborative way of working invited as part of the Integrated GroupLearning Project (GILP)
helpful?
Would you like to collaborate with organizations in the future?
Did your participation in this project make you more aware of the possible contribution that you can
make in order to make society better?
After your placement opportunity finished, did you consider the possibility of continuing your
involvement with the organization in a volunteering capacity?
What are your overall thoughts about the kind of learning experience that you had as part of DEL?
Were the required assessments as part of DEL appropriate?
Do you think it would be beneficial if more tutors used the teaching and learning that was part of DEL?
How did the tutors contribute toward meeting the intended learning outcomes of DEL?
What contribution did the placement sites often toward meeting the learning outcomes of DEL?
978-84-695-8363-0
1515
Resumen
Existe la insidiosa creencia de la falta de tradicin investigadora en la educacin espaola,
dada la ausencia de tesis doctorales defendidas desde antiguo en este campo. Se suele
entonces asumir sin fundamento que las dos primeras tesis doctorales en educacin fueron
las realizadas a principios del siglo XX por Luis de Zulueta (1909) y Jos Castillejo (1915).
Sin embargo, se desconoce toda una tradicin investigadora de tesis doctorales propias del
campo de la educacin, que fueron realizadas a lo largo del siglo XIX y defendidas en la
Universidad Central de Madrid, en su mayor parte en la Facultad de Medicina. Esta
comunicacin recupera tales tesis a partir del Catlogo Cisne de la Universidad
Complutense de Madrid. Posteriormente, se realiza una revisin cienciomtrica de tales tesis,
categorizndolas por tpicos y aportando las caracterizaciones cuantitativas ms relevantes.
Este estudio revisional pone de manifiesto un rico repertorio de ms de 60 tesis doctorales
espaolas en educacin realizadas desde 1841 hasta 1907, ao en que se crea la Junta de
Ampliacin de Estudios, tratando de reformar la tesis doctoral desde un carcter meramente
erudito y reflexivo para cimentarlas en una base eminentemente investigadora.
978-84-695-8363-0
1516
Introduccin
La elaboracin y defensa de tesis doctorales es una prctica universitaria que aparece
en la Edad Media. En el Antiguo Rgimen, los actos propios de la defensa de una tesis
doctoral constituan una carga onerosa para el doctor que acarre que el ttulo de doctor fuese
una nominacin meramente honorfica no necesaria para la promocin acadmica. Con las
reformas liberales de mediados del XIX del Plan Pidal (1845), el grado de doctor se convirti
en un ttulo obligatorio especialmente en Medicina (ver de Miguel, 2003).
Al margen de consideraciones legales y protohistricas, la racionalidad de este estudio
es doble. Por un lado, indagar la diacrona del desarrollo de la tesis doctoral en Espaa podra
ser una tarea relevante, pues pondremos de manifiesto nuestras realizaciones cientficas y
culturales, tratando de disipar la insidiosa concepcin de un nulo progreso cientfico en
nuestro pas. Recordemos, al respecto, la aeja polmica sobre la existencia de ciencia
espaola entre Menndez Pelayo y Gumersindo de Azcrate expuesta por primera vez en la
Revista Europea a partir de 1876. Una visin diacrnica de tesis doctorales espaolas para el
periodo 1848-2009 en todos los campos y disciplina la ofrecen Fernndez-Cano, Torralbo y
Vallejo (2012). Por otra y principal razn, se trata de disipar la insidiosa creencia de falta de
tradicin investigadora en el campo de la educacin en Espaa, dada la ausencia de tesis
doctorales defendidas desde antiguo en este campo pues, se suele asumir sin fundamento, que
las dos primeras tesis doctorales en educacin fueron las realizadas a principios del siglo XX
por Luis de Zulueta (1909) y Jos Castillejo (1915). Se desconoce toda una tradicin
investigadora de tesis doctorales propias del campo de la educacin, que fueron realizadas a lo
largo del siglo XIX y defendidas en la Universidad Central de Madrid, en su mayor parte en la
Facultad de Medicina.
La racionalidad del intervalo temporal considerado, 1840-1907, no es vana pues
apenas se ha indagado para el caso de las tesis de educacin, pues en otras disciplinas como
anestesia-analgesia obsttrica s disponemos de tales estudios pioneros (Franco, Corts y
lvarez, 2007). En la dcada de los aos cuarenta del siglo XIX, empiezan a redactarse las
memorias de las tesis en castellano, pues hasta entonces las tesis deban estar escritas en latn
e incluso el nombre propio del doctorando; Por ejemplo, la primera tesis considerada en este
estudio Dissertatio de infanticidio (1841) de Michael Hernndez Montero. Por otro lado, la
Universidad Central de Madrid ya estaba consolidada tras su traslado en 1836 de la anterior
sede en Alcal. La reforma liberal del Plan Pidal de 1845 haba fijado y definido los estudios
universitarios al modo francs (ver Petit, 1997), aunque el ceremonial para conferir el grado
de doctor estaba bien establecido desde 1831. Terminar la serie a indagar en 1907, obedece a
que en ese ao se crea la Junta de Ampliacin de Estudios, un revulsivo para mejorar la
ciencia y la cultura espaolas; y una de sus consecuencia fue posicionar la tesis doctoral sobre
un base ms cientfica (emprica), fuera del patrn decimonnico de tesis meramente eruditas
y, en el mejor de los casos, reflexivas y fruto de la experiencia profesional.
El doctorado tena entonces dos funciones principales: preparar profesores para la
enseanza superior y ampliar la formacin superior tratando de hacerla algo ms
especializada. Los estudios de doctorado consistan en cursar unas materias de ampliacin y
978-84-695-8363-0
1517
preparar un discurso, en un formato que no ha variado, sino ampliado, mucho con el tiempo.
A su vez, este grado se centraliz en la Universidad Central de Madrid y era gestionado e
impartido por los catedrticos de doctorado (ver Miguel, 2003). Un excepcin fue que la Real
Universidad de La Habana pudo otorgar el grado de doctor durante ciertos periodos
(Fernndez-Bautista, Torralbo y Fernndez-Cano, 2013).
Mtodo
Para realizar esta revisin cienciomtrica disponemos de dos apreciables fuentes de
datos como son el Catlogo Colectivo UCM-AECID y UCM-Tesis, ambas de la Universidad
Complutense de Madrid englobadas en el Catlogo Cisne, disponible en
http://cisne.sim.ucm.es/search*spi~S6/X. Estas bases recogen los discursos de doctorado,
forma legal de presentar la tesis segn normativa de 1845. Ese discurso, que se adjuntaba bien
manuscrito y/o editado por una imprenta en un depsito bibliotecario, es el que ha llegado hoy
a nosotros, como documento capital de la existencia de una tesis, para el estudio de esta
fuente primaria vlida y nica. El Catlogo Colectivo UCM-AECID y UCM-Tesis de la
Universidad Complutense sern las fuentes secundarias que nos atestigua la validez interna
del documento recuperado; sobre ellas, dos recolectores independientes han realizado una
bsqueda cuasi artesanal ao por ao del siglo XIX y hasta 1907, tratando de localizar en el
ttulo de la tesis un trmino truncado y propio del campo de la educacin (educa*, ense*,
escol*, escuel*, aprend*,). Tngase presente que UCM-Tesis no comprende a todas las
posibles tesis sino que hay que ampliar la bsqueda en el Catlogo Colectivo UCM-AECID
de esta misma institucin. Hay tesis incluidas en el Catlogo Colectivo pero no en la base
UCM-Tesis. Por ejemplo, la tesis de Ramn y Cajal de 1877, titulada Patogenia de la
inflamacin, se localiza en el Catlogo Colectivo pero no en UCM-Tesis. Algo similar ocurre
con la tesis de Po Baroja, Estudio acerca del dolor de 1896.
Esta revisin opera con datos censales conformados por un censo operante de 71 tesis.
La validacin externa de las fuentes primarias (tesis de educacin) se consigue mediante
evidencia documental de la ficha de tesis indexada, tras consenso entre dos recolectores.
Podemos acceder al contenido ntegro de algunas tesis a travs de la edicin digitalizada de
33 de ellas (46.5 %), lo cual nos permite un validacin completa tanto en veracidad (validez
interna) como en exactitud (validez externa).
La revisin cienciomtrica opera sobre datos cuantitativos propios de cada
documento/tesis, que son acumulables como indicadores del tipo: produccin diacrnica o
longitudinal, productividad institucional segn facultades, doble categorizacin conceptual
segn descriptores dados en la ficha indexada de cada tesis y los inferidos en el ttulo de la
misma; valores de extensin del documento segn nmero de pginas del manuscrito y/o del
libro. Sin duda, el indicador ms frtil ser el anlisis de descriptores que nos testimoniar la
problemtica propia del campo de la investigacin educativa en el siglo XIX.
Estudios similares a ste han sido realizados por Fernndez-Cano et al. (2003), sobre
tesis doctorales espaolas en educacin matemtica del periodo 1976-1998, y por FernndezCano, Torralbo y Vallejo (2008) con tesis doctorales de Pedagoga del periodo 1976-2006. Se
echaba en falta un estudio similar sobre tesis pioneras como una indagacin de los
fundamentos y orgenes de la investigacin educativa espaola.
978-84-695-8363-0
1518
Resultados
Produccin diacrnica
La visualizacin de la produccin de tesis doctorales segn aos para el periodo
considerado (1841-1907) se ofrece en la Figura 1.
978-84-695-8363-0
1519
Puede observarse como de mayor a menor presencia las tesis realizadas est referidas
a: educacin, mujeres, enseanza, salud, pblica, fsica
978-84-695-8363-0
1520
Figura 4. Descriptores inferidos del ttulo de tesis doctorales espaolas de educacin (1841-1907)
Red conceptual
A partir de los descriptores inferidos es factible realizar un anlisis de redes utilizando
el software Many Eyes (ver Figura 5).
Figura 5. Red conceptual de trminos inferidos de tesis doctorales espaolas en educacin (18411907)
978-84-695-8363-0
1521
La
red
obtenida
nos
expone
el
conglomerado
(educacin_fsica;
educacin_moral_educacin_mujer; educacin_salud) donde la centralidad sera el nodo
educacin_fsica con una mayor conectividad con educacin_moral y sta, a su vez, con
educacin_mujer).
Caracterizacin documental
La ficha de indexacin incluye un campo relativo a la descripcin fsica del
documento-tesis indicando nmero de hojas del manuscrito, nmero de pginas de la edicin
y formato de las pginas. Los valores promedio para las tesis disponibles son si manuscritos
(n = 59 tesis; = 59 hojas; s = 47 hojas), si edicin impresa (n = 51; = 32; s = 34). El
patrn es la tendencia a una mayor extensin con el paso del tiempo; aunque estaban muy
lejos de los valores de las extensas tesis actuales.
Discusin
Este estudio ofrece una visin global, nomottica, cuantitativa de un censo (71) de
tesis doctorales espaolas de educacin que fueron en su mayora defendidas en la Facultad
de Medina de la Universidad Central de Madrid y centradas en tpicos eminentemente
propios del campo de la educacin: fsica, moral, de la mujer, para la salud Sin embargo,
tambin sern admisibles, por complementarios, una serie de estudios idiosincrticos
centrados en el estudio puntual de una nica tesis a la que podramos considerar ejemplar.
Flecha (1999) ha indagado dos tesis pioneras centradas en la educacin de la mujer que
elaboraron las dos primeras doctoras en Medicina de la universidad espaola: Dolores Aleu i
Riera (1882) y Martina Castells i Ballesp (1882). Disciplinas actuales, como la educacin
matemtica tendra su tesis pionera en Fernndez Valln (1857), la educacin cientfica en
Fuster (1864), la metodologa de la enseanza en Lamadrid (1850), la educacin fsica
(Vilardell, 1877) o la educacin contra las drogodependencias en Ondiviela (1907); estas tesis
pioneras debieran ser un referente cualificado y que aqu referenciamos manteniendo su
ortografa original. Tambin sera factible considerar agrupaciones de tesis como las relativas
a educacin para la salud; una disciplina preterida en los actuales planes de estudios de
maestros y subsumida en los currculos escolares entre una maraa de contenidos de
conocimiento del medio.
A modo de consideracin final, es procedente poner de manifiesto que la investigacin
educativa espaola dispone de una tradicin de realizaciones desde el siglo XIX que la
posicionan como un campo de indagacin frtil desde antiguo.
Referencias
Aleu, D. (1882). De la necesidad de encaminar por una nueva senda la educacin higinicomoral de la mujer. (Tesis de doctorado). Facultad de Medicina-Universidad Central,
Madrid.
Castells, M. (1882). Educacin fsica, moral e intelectual que debe darse a la mujer para que
sta contribuya en grado mximo a la perfeccin y la dicha de la humanidad. (Tesis
de doctorado). Facultad de Medicina-Universidad Central, Madrid.
Fernndez-Bautista, A., Torralbo, M., Vallejo, M. y Fernndez-Cano, A. (2013, junio). Tesis
doctorales defendidas en la universidad de La Habana durante el siglo XIX.
978-84-695-8363-0
1522
978-84-695-8363-0
1523
978-84-695-8363-0
1524
Resumen
Diferentes estudios realizados ponen de manifiesto que la realidad de hombres y mujeres en
la direccin de tesis doctorales es hartamente desigual. En este sentido, a travs de este
trabajo damos a conocer las relaciones de mentorazgo director-doctorando y su evolucin
diacrnica durante los ltimos 35 aos en una de las disciplinas del campo educativo, cuales
es la educacin matemtica. Adems, se analiza el desarrollo longitudinal de los efectos
simples ms relevantes y se infieren patrones prospectivos para los prximos siete aos;
utilizando modelos de pronstico deterministas y modelos ARIMA. Los resultados muestran
una realidad diferente a lo largo del periodo analizado; en concreto, se detectan sesgos
acentuados contra la mujer en la direccin de tesis doctorales y la existencia de un patrn
emergente, en el sentido de que esta actividad directiva pareciera buscar la paridad a travs
de la coordinacin mixta (hombre-mujer)de tesis doctorales.
Introduccin
Dentro de las investigaciones cienciomtricas, las tesis doctorales son documentos que
paulatinamente se han venido utilizando cada vez ms. Esta consideracin de la tesis doctoral
978-84-695-8363-0
1525
como elemento factible de ser analizado est avalada por estudios como los realizados por
Aguadelo et al. (2003); Fernndez-Cano, Torralbo y Vallejo (2008); Fernndez-Cano,
Torralbo y Vallejo (2012) o Vallejo, Fernndez-Cano, Torralbo y Maz (2007). As, cobran
relevancia manifestaciones como:
el nmero de tesis doctorales constituye un indicador del potencial
de formacin de una determinado sistema de ciencia y tecnologa y tambin de
la produccin cientfica propia, ya que estos trabajos dan lugar,
posteriormente, a un volumen importante de artculos y libros de investigacin
(Maluquer, 2004; p. 15).
De la misma forma, el estudio de estas fuentes documentales nos permite conocer las
denominadas escuelas cientficas; es decir, estructuras acadmicas en las que confluyen, no
solo, relaciones acadmicas sino tambin relaciones personales. Algo que puede derivar al
mbito conocido como sociologa de la ciencia, indagando las estructuras, componentes e
influencias sociales que se generan entre los cientficos. Esta idea nos remite, a su vez, a la
mitologa griega; al pasaje donde la diosa Atenea se hace pasar por Mentor, el hijo de lcimo
y amigo de Ulises, para acompaar a Telmaco en la bsqueda de su padre. As, el nombre de
este personaje ha sido utilizado para hacer referencia a ese sabio consejero que vela por
nosotros y por nuestros intereses; realizando tareas muy cercanas a la formacin y/o
educacin. De hecho, en el campo de la educacin, los conceptos de profesor-mentor y
alumno-mentor tienen una amplia trayectoria apoyada en una ingente bibliografa revisada en
Fernndez-Cano, Torralbo, Vallejo y Fernndez-Guerrero (2012). Cuestin sobre la que
indagaremos a lo largo del presente trabajo.
Mujer y Ciencia
Tradicionalmente la ciencia se ha caracterizado por ser objetiva, neutral y analtica;
caractersticas coincidente con las cualidades que se le atribuyen al gnero masculino, frente a
la subjetividad e intuicin del gnero femenino. En la actualidad, la ciencia es considerada
como un saber establecido e indiscutible, aunque esta realidad, que parece incuestionable
ahora, no siempre fue as. Las primeras formas de saber se agruparon en torno a la filosofa y,
posteriormente, se fueron configurando diferentes tradiciones y prcticas de carcter tcnico;
y otras, se fueron agrupando para dar lugar a las actuales disciplinas cientficas. As, la
historia ha conferido validez cultural a la mayora de esfuerzos intelectuales que han sido
histricamente del dominio de los hombres, mientras que las dems (donde haba mayor
presencia femenina) quedaban excluidas de lo que denominamos campo cientfico. Si bien es
cierto que, a lo largo de la historia, han existido mujeres investigadoras que han favorecido el
avance cientfico en diferentes campos de la ciencia. Algunos ejemplos destacados seran:
Marie Curie, Rosalind Franklin, Hipatia, Jocelyn Bell Burnell, Ada Lovelace, Lise Meitner,
Dorothy Crowfoot, Sophie Germain, Rachel Carson o Jane Goodall, entre otras. Estos
ejemplos de mujeres cientficas muestran que los trabajos y logros de stas han sido,
indudablemente, decisivos para el conocimiento de la ciencia. Algunos ejemplos de ello
seran las aportaciones que, segn Merchant (1980) o Schiebinger (1989), han realizado las
mujeres en campos como la ecologa, la medicina, la educacin o la astronoma. De hecho,
este segundo autor, pone de manifiesto la importancia de las tareas que stas realizaban para
la ciencia desde la clandestinidad o, mejor dicho, desde la invisibilidad de los laboratorios o
los campos de trabajo. Tal vez, ste haya sido uno de los fundamentos por las que entidades
pblicas y privadas han promovido la paridad de gnero en el mbito cientfico. No obstante,
y a pesar de los avances alcanzados, los estudios ms recientes reconocen la escasez de
978-84-695-8363-0
1526
Mtodo
Todo lo planteada hasta el momento nos conduce a analizar las relaciones de
mentorazgo entre directores y doctorando de los ltimos 35 aos en las tesis doctorales
espaolas de educacin matemtica; examinando con ello la realidad de la mujer en este
campo de la ciencia. Esta realidad se analiza longitudinalmente y se infieren patrones
prospectivos para los prximos siete aos; utilizando modelos de pronstico deterministas y
modelos ARIMA. Para ello, hemos sometido a estos tipos de anlisis la produccin espaola
de tesis doctorales en educacin matemtica defendidas en las universidades pblicas desde
1976 hasta el ao 2011. Concretamente, la poblacin objeto de estudio la constituyen 414
tesis doctorales relativas a la educacin matemtica.
La base de datos utilizada para la obtencin de la informacin ha sido TESEO y el
criterio para establecer que una tesis doctoral corresponde a nuestro campo de anlisis, ha
consistido en detectar si su objeto de estudio se refiere a la enseanza-aprendizaje de las
matemticas en cualquiera de los niveles educativos, y tpicos de indagacin como
innovacin, diseo y desarrollo curricular, formacin del profesorado o fundamentacin
terica del campo de la educacin matemtica.
Resultados
Direccin de tesis doctorales
De manera general podemos indicar que los resultados encontrados muestran que el
70.05% de las tesis doctorales son dirigidas, exclusivamente, por hombres frente al 17.63%
que los son por mujeres. El11, 59% restante hacen referencia a codirecciones mixtas
(hombres-mujeres), con una mayor presencia de los hombres56.
Desconocemos si este hecho viene influenciado por la complejidad intrnseca que
conlleva la tutela de este tipo de trabajos (tiempo de coordinacin conjunta, acuerdos a
adoptar, distancia geogrfica en el caso de pertenecer a diferentes instituciones, etc.) o se trata
de una cuestin meritocrtica por parte del director.
Tabla 1
Direccin-autora de tesis doctorales
Direccin
Autor
Mixtas
(mayoritariame nte
hombres X-H)
6
Mixtas
(mayoritariame nte
mujeres X-M)
22
17
Hombre
(H)
Hombres
(H-H)
Mujer
(M)
Mujeres
(M-M)
Hombre
125
27
31
Mujer
106
31
34
978-84-695-8363-0
1527
Por otro lado, cuando cruzamos los tipos de direcciones con el gnero de los autores, los
datos que obtenemos son (vase Tabla 2):
Tabla 2
Anlisis longitudinal de direccin-autora de tesis doctorales (agrupado en cuatrienios)
Aos
Direccin
Autor
19761979
19801983
19841987
19881991
19921995
19961999
20002003
20042007
20082011
Hombre
Mujer
Hombre
Mujer
Hombre
Mujer
Hombre
Mujer
Hombre
Mujer
Hombre
Mujer
Hombre
Mujer
Hombre
Mujer
Hombre
Mujer
Ho
mb
re
(H)
5
2
3
2
6
3
13
11
16
19
26
20
31
21
15
18
9
10
Hombr
es
(H-H)
Muje
r
(M)
Mujer
es
(M-M)
Mixtas
masculinas(mayoritaria
me nte hombres: X-H)
Mixtas
Fe meninas(mayoritaria
me nte mujeres: X-M)
3
1
3
4
6
8
6
5
12
6
4
2
3
1
5
2
3
6
4
4
8
12
6
3
2
4
1
2
1
2
2
1
1
2
1
1
2
1
1
1
1
2
2
6
4
5
4
9
6
978-84-695-8363-0
1528
Tau_b de
Kendall
Rho de
Spearman
Coeficiente de correlacin
Autor_Hombr
Sig. (bilateral)
e
N
Coeficiente de correlacin
Autora_Muje
Sig. (bilateral)
r
N
Coeficiente de correlacin
Autor_Hombr
Sig. (bilateral)
e
N
Coeficiente de correlacin
Autora_Muje
Sig. (bilateral)
r
N
Autor Hombre
1,000
.
6
,828*
,022
6
1,000
.
6
,928**
,008
6
Autora Mujer
,828*
,022
6
1,000
.
6
,928**
,008
6
1,000
.
6
Los resultados determinan una falta de sesgos en relacin al gnero de los autores de
las tesis doctorales, denotndose un patrn muy similar en relacin a las direcciones (tipos).
Por lo que en este sentido, el mentorzgo de hombres y mujeres sigue patrones similares en
relacin a la direccin de tesis doctorales del campo de las matemticas durante el periodo
1975-2011. Ratificndose, as, el hallazgo de un patrn institucionalizado cual es el de la
monodireccin masculina para hombres y mujeres.
978-84-695-8363-0
1529
Anlisis prospectivos
Los resultados mostrados hasta el momento muestran realidades muy diferentes segn
cada tipo o modalidad de direccin. Por ello nos planteamos conocer cmo variarn estos
patrones para un periodo de siete aos. En este sentido, se realiza un anlisis prospectivo para
cada una de las modalidades de direccin-autora utilizando modelos de pronstico
determinista y modelos ARIMA para cada una de las series temporales generadas respecto a
las modalidades de direccin.
En la Tabla 4 se recogen los modelos de pronstico deterministas y modelos ARIMA
de mayor ajuste a cada serie generada57.
Tabla 4
Modelos prospectivos de ajuste
Autor x Director
Modelo determinista
ARIMA
Pronstico (intervalos)
HxH
HxM
H x H-H
H x M-M
H x XH
H x XM
MxH
MxM
M x H-H
M x M-M
M x XH
M x XM
Exponencial
Tendencia lineal
Modelo de Holt
Tendencial lineal
Tendencial lineal
Modelo de Holt
Tendencial lineal
Tendencial lineal
Modelo de Holt
Tendencial lineal
Tendencial lineal
Expone ncial
(1,1,0)
(1,1,1)
(1,1,4)
(2,0,0)
(0,0,0)
(2,3,2)
(1,0,3)
(2,1,1)
(1,1,3)
(0,0,0)
(0,0,0)
(1,3,0)
1-9
1-4
2-4
0-1
0-1
2-5
3-8
1-4
0-1
0-1
0-1
1-4
978-84-695-8363-0
1530
El ltimo conjunto que podemos establecer seran todas aquellas series cuyos valores
prospectivos determinan una frecuencia bastante ocasional (1-4 tesis doctorales) respecto a la
relacin autora-direccin. Estos casos seran los que hemos denominado: H x M-M; H x XH,
M x H-H; M x M-M y Mx XH.
Conclusiones
Uno de los primeros hallazgos de este estudio es la constatacin de un sesgo
acentuado en la direccin de tesis doctorales sobre educacin matemtica. Es manifiesto el
efecto Atenea o sesgo contra las mujeres en el sentido de que los hombres dirigen ms tesis
doctorales que las mujeres. Se trata de un patrn tpico en educacin matemtica superior
como lo atestiguan diferentes estudios realizados (vase Chan, 2003; National Science
Foundation, 2000). Del mismo modo, queda evidenciado la existencia un patrn slido de
mentorazgo de tesis doctorales que pareciera estar institucionalizado en el campo de la
educacin matemtica, cual es la monodireccin masculina, con independencia del gnero de
su autor. Las causas pueden ser varias y variopintas: la relacin pasada entre las matemticas
y los hombres o las diferencias de status profesional-acadmico entre hombres y mujeres o las
cuestiones meritocrticas ya aducidas anteriormente. Si bien pudiera ser cierto cualquiera de
las cuestiones planteadas u otras no explicitadas, s que podemos aseverar que se produce una
mejora de la calidad de los trabajos doctorales cuando confluyen directores de diferentes
saberes o campos cientficos, como es el caso investigado (educacin y matemticas).
Finalmente destacar la existencia de un patrn emergente en la actividad directiva que
parece buscar la paridad en el gnero de los directores, vislumbrando un futuro en el que la
mujer cientfica desarrollar nuevos roles y funciones en el campo de la ciencia. Este camino
por recorrer se divisa largo y cargado de retos, pero como ya anticip el matemtico Gauss:
when a person of the sex which, according to our customs and prejudices, must
encounter infinitely more difficulties than men to familiarize herself with these
thorny researches, succeeds nevertheless in surmounting these obstacles and
penetrating the most obscure parts of them, then without doubt she must have the
noblest courage, quite extraordinary talents and superior genius. Indeed nothing
could prove to me in so flattering and less equivocal manner that the attractions of
this science, which has enriched my life with so many joys, are not chimerical,
[than] the predilection with which you have honored it (Carl Friedrich Gauss,
circa 1806; citation en Gray, 1987).
Referencias
Agudelo, D. et al. (2003). Anlisis de la productividad cientfica de la psicologa espaola a
travs de las tesis doctorales. Psicothema, 15(4), 595-609.
Chan, T. F. (2003). The mathematics doctorate: A time for change? Notices of the American
Mathematical Society, 50, 896-902.
Fernndez-Cano, A., Torralbo, M. y Vallejo, M. (2008). Revisin y prospectiva de la
produccin en tesis doctorales de Pedagoga (1976-2006). Revista de Investigacin
Educativa (RIE), 26(1), 191-207.
978-84-695-8363-0
1531
978-84-695-8363-0
1532
Resumen
La experiencia que presentamos nace por un lado, de la participacin en el Proyecto Reevala destinado a comprobar el impacto que poda tener la e-evaluacinorientada al
aprendizaje en el desarrollo de nuestras competencias profesionales como profesores/as
universitarios y en nuestros estudiantes. Por otro lado, se desarrolla a partir de dos
Proyectos de Innovacin Educativa denominados Eval-Aula I y II implementados en la
Universitat de Valncia. El objetivo de esta comunicacin es doble: por un lado presentar los
proyectos de innovacin educativa implementados y, por otro, explicar cmo hemos aplicado
la metodologa de la e-evaluacina partir de la plataforma Aula Virtual (AV), en
asignaturasimpartidas en elcurso 2011-12 y 2012-13. Como conclusiones, se plantean todos
aquellos aspectos que hemos aprendido/reflexionado/investigado a partir del trabajo en estos
dos proyectos y las limitaciones/dificultades encontradas.
Introduccin
En el mbito de la innovacin docente son esenciales el esfuerzo y la preocupacin
constante por la docencia as como la creacin de equipos interdisciplinares que la promuevan
y pongan en marcha sus experiencias. Por lo que consideramos a la innovacin como el motor
que precisan los nuevos escenarios de enseanza/aprendizaje, concretamente como aquel
978-84-695-8363-0
1533
cambio y mejora para dar una respuesta adecuada y adaptada a las necesidades formativas e
intereses de nuestros estudiantes (Chiva et al., 2012).
Desde este marco, entendemos que: la innovacin docente se puede llevar a cabo
siempre y cuando se cuente, ms all de la coordinacin docente, con la colaboracin y
cooperacin entre profesores/as. Es necesario el apoyo institucional que promueva proyectos
de investigacin y reconozca la innovacin realizada por los docentes y es imprescindible
contar con una formacin y actualizacin docente que generen grupos de personas formadas e
interesadas en la mejora. Esta perspectiva responde a la idea que Zabalza (2006) y Rodrguez
Espinar (2003) sealan como una de las competencias clave del docente universitariosaber
trabajar en colaboracin, lo que supone una buena coordinacin entre colegas. Este es el
germen de nuestra experiencia que secentraen un tema concreto como es la e-evaluacindel
aprendizaje de los estudiantes, utilizando para ello las plataformas virtuales de formacin. De
esta manera, se responde tambin al desarrollo de una competencia bsica del docente
universitario, competencia a la que Rodrguez Espinar (2003) denomina conocimiento de las
aplicaciones TIC para su campo disciplinar, y a la que Zabalza (2006) denomina
incorporacin de nuevas tecnologas y recursos diversos como una de las dimensiones
bsicas para una docencia de calidad. Por otro lado, tampoco hay que olvidar que esta
experiencia nos ha permitido atender a una tercera competencia clave del docente como es el
establecimiento de mecanismos de revisin del proceso de enseanza-aprendizaje
(Zabalza, 2006), ya que en todo momento, y valga como ejemplo esta comunicacin, estamos
reflexionando respecto a lo que estamos haciendo, cmo lo estamos haciendo y qu grado de
competencias obtienen los estudiantes.
Respecto al tema que concretalos procesos deinnovacin educativa en los que estamos
inmersos, la aplicacin de la e-evaluacinal aprendizaje de los estudiantes, somos
conscientes, tal y como sealan Ibarra y Rodrguez (2010), que aunque en la prctica
cotidiana de las aulas universitarias se sigue poniendo el nfasis en la evaluacin que lleva a
cabo el profesorado, en los ltimos aos se estn introduciendo cambios e innovaciones en los
sistemas y procedimientos de evaluacin (Boud, 2006) que conceden un mayor protagonismo
a los estudiantes como evaluadores de su proceso de aprendizaje. En este contexto se est
introduciendo cada vez, con ms fuerza, la evaluacin orientada al aprendizaje, tal y como
destacan Ibarra y Rodrguez (2010); Carless (2003); Boud y Falchikov (2006); Keppell et al.
(2006); Bloxham y Boyd (2007) o Padilla y Gil (2008). Especficamente al situarnos en
contextos virtuales nos encontramos con la e-evaluacin orientada al e-aprendizaje,
entendiendo que se trata de cualquier proceso electrnico de evaluacin en el que son
utilizadas las TICs para la presentacin de las actividades, las tareas de evaluacin y el
registro de las respuestas (Rodrguez e Ibarra, 2011: 36). Es decir, una evaluacin:
Orientada al aprendizaje.
Con proalimentacin continua.
Autntica.
Con la participacin del estudiante en su propia evaluacin
Desde diversasmodalidades y participacin de los estudiantes (evaluacin entre
iguales, autoevaluacin)
978-84-695-8363-0
1534
De ah que los objetivos que nos proponemos en esta comunicacin son dos:
- Presentar las caractersticas de los proyectos de innovacin educativa implementados
hasta el momento por nuestro grupo de trabajo.
- Explicar cmo hemos aplicado la metodologa de la e-evaluacina partir de la
plataforma Aula Virtual, en asignaturas impartidas durante el curso 2011-12 y 201213.
Mtodo
Esta experiencia de innovacin docente surge a partir de la participacin de un grupo
de profesores/as de la Universitat de Valncia en un Proyecto Interuniversitario de Excelencia
denominado Re-evala: Reingeniera de la e-evaluacin, tecnologas y desarrollo de
competencias en profesores/as y estudiantes universitarios, cuyo objetivo era comprobar el
impacto que puede tener la e-evaluacin orientada al aprendizaje en el desarrollo de
nuestras competencias profesionales como profesores universitarios y en el desarrollo de las
competencias de nuestros estudiantes (Chiva et al, 2012). A partir de aqu y de acuerdo con el
inters y la motivacin de este grupo de profesores y profesoras por la docencia y su
investigacin, se consider importante continuar con ese objeto de investigacin concreto y
por ello se solicita un proyecto centrado en la Universitat de Valncia y con las caractersticas
de su plataforma virtual de formacin. De ah surge el primer proyecto de innovacin docente
Eval-aula en la convocatoria de proyectos de innovacin educativa 2011-12. En estos
momentos y viendo lo positivo de esta experiencia estamos inmersosen un segundo proyecto
perteneciente a la convocatoria 2012-2013 - ver Tabla 1 -.
Tabla 1
Contexto experiencia investigadora del grupo
9 Experiencia Previa: Curso CIDU o DIGEU (desde el 2000 hasta el 2010),
Coordinacin/Imparticin Cursos de Formacin, participacin en diversos proyectos de
innovacin educativa
9 Proyecto REEVALUA (2009-2013). Reingeniera de la e-evaluacin, tecnologas y desarrollo
de competencias en profesores y estudiantes universitarios (Proyecto de Excelencia P08-SEJ03502). Desarrollado por el Grupo de Investigacin EVALfor de la Universidad de Cdiz.
9 Proyecto EVAL-AULA (2011-2012). Desarrollo y metodologa de la e-evaluacinpara su
integracin en Aula Virtual (Proyecto de innovacin educativa de la Universitat de Valencia
2011-12)
9 Proyecto EVAL-AULA II. (2012-2013). Implementacin de la metodologa de la eevaluacinen la plataforma de Aula Virtual (Proyecto de innovacin educativa de la
Universitat de Valencia 2012-13)
978-84-695-8363-0
1535
formacin para profesorado universitarios. Entre ellos, destaca que todos ellos, los docentes
participantes en esta experiencia, han realizado el CIDU Curso de Iniciacin a la Docencia
Universitaria o el Diploma dinvestigaci, Gesti i EnsenyamentUniversitari (DIGEU) en la
Universitat de Valncia. Tanto el curso como el diploma permiten adquirir competencias
docentes para implementar procesos de cambio e innovacin docente en los profesores/as
noveles.
9 Respecto a las reas, Titulaciones, Materias y Cursos (ver Tabla 2)
Tabla 2
reas, titulaciones, materias y cursos docentes participantes en la experiencia
Nmero de Profesores
7 (2011-12)8 (2012-13)
De 7 a 20
Ramas de conocimiento
Materias
Catalogacin automatizada
Odontopediatra
Psicologa de la motivacin y la
emocin
Metodologa de la evaluacin
educativa
Medicin Educativa
Lengua espaola para maestros
Ciencias de la Salud
Ciencias Sociales
Titulacin
Grado de Informacin y
Documentacin (2)
Grado de Odontologa (4)
Curso 11-12
Curso 2012-13
60
70
78
75
133
90
80
130
80
45
45
978-84-695-8363-0
1536
Resultados
En lo referente al primer objetivo: presentar las caractersticas de los proyectos de
innovacin educativa implementados hasta el momento por nuestro grupo de trabajo, sealar
que se han implementado dos proyectos de innovacin educativa subvencionados por la
Universitat de Valncia: Eval-Aula y Eval-Aula II en dos convocatorias consecutivas, 201112 y 2012-13. En ambos proyectos el objetivo general era desarrollar e implementar el uso de
la e-evaluacin en la Universitat de Valncia a partir de su aplicacin en diferentes
asignaturas de grado de distintas titulaciones. Para conseguir este objetivo se pusieron en
marcha diferentes objetivos especficos que resumimos a continuacin:
1. Disear procesos de e-evaluacinpara distintas asignaturas.
2. Disear y desarrollar instrumentos y herramientas evaluativas adaptadas a los procesos
de e-evaluacin.
3. Implicar a los estudiantes de forma activa en la e-evaluacin, a travs de tcnicas
como la autoevaluacin y la heteroevaluacin.
4. Implementar los procesos de e-evaluacina travs de la plataforma de Aula Virtual.
Detectar nuevas funciones y/o posibilidades de la plataforma Aula Virtual para el
desarrollo de procesos de e-evaluacin.
En cuanto al segundo objetivo: explicar cmo hemos aplicado la metodologa de la eevaluacina partir de la plataforma Aula Virtual, en las asignaturas que impartimos durante
el curso 2011-12 y 2012-13, sealar que se ponen en marcha diferentes acciones, entre ellas:
978-84-695-8363-0
1537
Concretamente, apuntar que en todas las asignaturas que forman parte de estos
proyectos se ha llevado a cabo la evaluacin del estudiante ntegramente a travs de la
Plataforma Aula Virtual (AV) (ver Figura 1). Esto ha supuesto que se han planteado a los
estudiantes: Tareas, Cuestionarios, Foros, Ejercicios de autocomprobacin, en algunos casos
exmenes. Todas estas actividades de e-evaluacinhan sido evaluadas a travs del mdulo
Fichas de estudiantes. As cada alumno/a ha conocido su nota individual detallada por bloques
y tareas sujetas a evaluacin.
Por otro lado, se han implementado estrategias de autoevaluacin por parte del
estudiante, a travs de cuestionarios creados al efecto y en estos momentos estamos
trabajando y reflexionando respecto a la posible implementacin en la plataforma AV de una
rbrica para la evaluacin entre iguales.
Discusin
En cuanto a las conclusiones e implicaciones extradas a partir de la implementacin
de estos dos proyectos y de su posterior anlisis, podemos destacar de manera global que:las
acciones innovadoras implementadas nos han permitido mejorar los procesos evaluativos
implementados a travs de la plataforma de Aula Virtual de la Universitat de Valncia; se ha
978-84-695-8363-0
1538
Respecto a lae-evaluacin
y Hemos aprendido que es posible trabajar en diferentes disciplinas la e-evaluacinpor
su naturaleza flexible/ multimodal.
y Hemos aprendido conceptos nuevos relacionados con la evaluacin y lo que implican
para los estudiantes y su aprendizaje (evaluacin autntica, evaluacin orientada al
aprendizaje, coevaluacin y autoevaluacin).
y Hemos desarrollado instrumentos de evaluacin eficaces para la e-evaluacin: listas
de verificacin, escalas de valoracin y rbricas.
978-84-695-8363-0
1539
Referencias
Bloxham, S. y Boyd, P. (2007). Developing effective assessment in Higher Education. A
practical guide. New York: Open University Press - McGraw Hill Education.
Boud, D. (2006). Foreword. En C. Bryan & K. Clegg (Eds.), Innovative Assessment in Higher
Education (xvii-xix). London: Routledge.
Boud, D. & Falchikov, N. (2006). Aligning assessment with long-term learning. Assessment
& Evaluation in Higher Education, 31(4), 399-413.
Carless, D. (2003, noviembre). Learning-oriented assessment. Paper presented at the
Evaluation and Assessment Conference. Adelaide, University of South Australia.
Chiva, I., Ramos, G., Alonso, A., Catal, M., Gmez, M. B., Simo, S. y Vello, M.A. (2012,
noviembre). Una experiencia de colaboracin docente interdisciplinar e
interfacultativa para la mejora de la docencia universitaria. Comunicacin presentada
al I Congreso Virtual Internacional sobre innovacin pedaggica y praxis
educativa.INNOVAGOGIA 2012.
Ibarra Siz, M. S. y Rodrguez Gmez, G. (2010). Aproximacin al discurso dominante de la
evaluacin del aprendizaje en la Universidad. Revista de Educacin, 351, 381-407.
Keppell, M., y Chan, C. (2006). Peer learning and learning-oriented assessment in
technology-enhanced environments. Assessment & Evaluation in Higher Education,
31(4), 453-464.
Padilla, M. T. y Gil, J. (2008). La evaluacin orientada al aprendizaje en la Educacin
Superior: condiciones y estrategias para su aplicacin en la docencia universitaria.
Revista Espaola de Pedagoga, 241, 467-486.
Rodrguez Espinar, S. (2003). Nuevos retos y enfoques en la formacin del profesorado
universitario. Revista de Educacin, 331, 67-99
Rodrguez Gmez, G. e Ibarra Siz, M.S, (Eds.) (2011). e-evaluacin orientada al eaprendizaje estratgico en Educacin Superior. Madrid: Narcea.
Zabalza, M. (2006). Competencias docentes del profesorado universitario. Calidad y
desarrollo profesional. Madrid: Narcea.
978-84-695-8363-0
1540
Resumen
Nuestro estudio pretende conocer las puntuaciones obtenidas en inteligencia emocional
autoinformada y afectos en los participantes del mismo, y establecer la existencia de
diferencias significativas en las valoraciones obtenidas en funcin de las variables
sociodemogrficas consideradas. La muestra estuvo compuesta por 132 estudiantes de
educacin primaria. A todos ellos se les administr el cuestionario EQi-YV de Inteligencia
Emocional Autopercibida y la Escala de Afectos Positivos y Negativos para nios y
adolescentes PANASN-. Se ha realizado un estudio descriptivo de las dimensiones
consideradas en los instrumentos y un anlisis para la obtencin de diferencias significativas
(pruebas t y ANOVA) entre las variables sociodemogrficas. Las dimensiones ms valoradas
de la Inteligencia Emocional Autopercibida han sido el estado general de nimo y las
relaciones interpersonales, siendo las menos valoradas la dimensin intrapersonal y la
referida al control de las emociones. En relacin a los afectos, los positivos obtienen una
valoracin superior a los negativos. Hemos encontrado diferencias significativas en el estado
general de nimo en funcin del centro evaluado y en el control de las emociones en funcin
del gnero.
978-84-695-8363-0
1541
Introduccin
Educar nuestros sentimientos, controlar nuestras emociones y gestionarlas de forma
correcta para poder hacer frente a la adversidad y a los fracasos, y saber relacionarlos con los
dems son herramientas indispensables para llevar una vida ms o menos feliz. Sin embargo,
no nacemos sabindolas, sino que las tenemos que aprender. La inteligencia emocional (IE) se
ha convertido en una destreza esencial en el desarrollo tanto de personas como de
organizaciones, porque sus principios proporcionan una nueva manera de entender y evaluar
el comportamiento y las habilidades de cada uno. No podemos vivir slo de las emociones,
porque nuestra vida sera un caos, pero lo cierto es que tampoco podemos prescindir de ellas
(Molero y Ortega-lvarez, 2011).
A pesar de la importancia de la IE en el mundo educativo, somos sensibles a la
dificultad de la implementacin de esta formacin en la escuela. Coincidimos con Palomera,
Fernndez-Berrocal y Brackett (2008) en los importantes obstculos que nos encontramos en
la escuela para su desarrollo, ya que el xito depende de la implicacin y colaboracin de toda
la comunidad educativa (Molero, 2009; Pena, Extremera y Pacheco, 2011). Sin duda la
gestin emocional debe ser incluida en la formacin inicial de los docentes, ya que la
competencia emocional permitir potenciar en los futuros profesionales de la educacin un
perfil profesional y personal con autntico compromiso hacia los otros.
La diferenciacin entre afecto positivo (AP) y afecto negativo (AN) ha sido
considerada como uno de los aspectos ms importantes para la separacin conceptual entre la
ansiedad y la depresin tanto en adultos (Sandn et al., 1999) como en la infancia (Sandn,
2003); si bien tanto la ansiedad como la depresin comparten un elevado AN, nicamente la
depresin se caracteriza por asociarse a niveles bajo de AP.
Los objetivos de nuestro estudio pretenden: (1) conocer las puntuaciones obtenidas en
inteligencia emocional autoinformada y en afectos en los participantes del mismo, y (2)
establecer la existencia de diferencias significativas en las valoraciones obtenidas en funcin
de las variables sociodemogrficas consideradas.
Mtodo
Participantes
La muestra estuvo compuesta por 132 estudiantes de educacin primaria de dos
centros pblicos de la ciudad de Martos, provincia de Jan Espaa (64 del Centro 1 y 68
del Centro 2). 43 de ellos de 4 curso (32.57%), 41 de 5 curso (31.06%) y 48 de 6 (36.36%).
En relacin al sexo de los mismos, 64 eran nios (48.8%) y 68 nias (51.51%). Sus edades
estaban comprendidas entre los 9 y los 13 aos (Media=10.44 aos, DT=.95).
Los centros educativos nos permitieron administrar los instrumentos considerados y
realizar el estudio una vez recibida la autorizacin de los familiares de los escolares.
978-84-695-8363-0
1542
Instrumentos
Cuestionario de datos socio-demogrficos
Se incluyeron preguntas sobre variables socio-demogrficas de los sujetos objeto de
estudio: centro educativo (Centro 1 y Centro 2), sexo (hombre o mujer) y curso (4, 5 y 6 de
Primaria).
Emotional Quotient Inventory -Young Version- EQi-YV
Este instrumento, conocido como EQi-YV (Bar-On y Parker, 2000), est destinado a
estudiantes con edades comprendidas entre los 6 y los 18 aos de edad. La escala est
formada por 60 tems tipo Likert con un rango de puntuacin que oscila entre 1 y 4. En ella se
valoran cinco dimensiones: Estado general de nimo (habilidad para tener una actitud positiva
ante la vida), Adaptabilidad (flexibilidad y eficacia para resolver conflictos), Manejo de las
emociones/control del estrs (habilidad para dirigir y controlar las propias emociones),
Interpersonal (habilidad para entender y apreciar las emociones de los otros), e Intrapersonal
(habilidad para comprender las propias emociones y su comunicacin a los otros).
En la versin espaola (Ferrndiz et al., 2012), la fiabilidad para cada una de las
dimensiones oscila entre .63 y .80 (Estado de nimo = .80; Adaptabilidad =.77; Manejo de
las emociones o control del estrs =.77; Interpersonal =.72; e Intrapersonal =.63).
Escala de Afectos Positivos y Negativos para nios y adolescentes (PANASN)
Fue la adaptacin espaola para nios y adolescentes de la conocida prueba Positive
and Negative Affect Schedule (PANAS) de Watson, Clark y Tellesgen (1988), ya que la
versin original, a pesar de ser un instrumento de gran inters y de enorme aceptacin
internacional es una prueba diseada para personas adultas, no adecuada para nios y
adolescentes. Esta adaptacin espaola a poblacin escolar desarrollada por Sandn (2003) se
denomina Escala de Afectos Positivos (AP) y Afectos Negativos (AN) para nios y
adolescentes (PANASN). La validez factorial del PANASN es similar a la estructura del
PANAS, ya que incluye el mismo nmero de tems que la versin original, 20 tems con una
valoracin tipo Likert de 3 puntos, 10 sobre Afectos Negativos (AN) y 10 sobre Afectos
Positivos (AP); confirmndose la estructura bidimensional de la escala original (Sandn,
2003).
La fiabilidad informada (consistencia interna) de esta escala para nios (PANASN),
por el autor de la misma es superior a .70 en las dos subescalas (AN chicos =.74, AN chicas
=.75; AP chicos =.73, AP chicas =.72).
Procedimiento
Una vez obtenidos los correspondientes permisos de las familias de los escolares y de
los centros educativos, se le administraron a todos los sujetos de la muestra los instrumentos
en su contexto natural de aprendizaje durante el desarrollo de los procesos de enseanza y
aprendizaje en el horario habitual de clase en presencia de los docentes que impartan clase en
ese momento. Tras la recogida de los datos se procedi al anlisis estadstico de los mismos.
978-84-695-8363-0
1543
Anlisis de estadstico
Se realiz un estudio descriptivo (medidas de tendencia central y dispersin) de las
dimensiones consideradas en los instrumentos y otro anlisis para la obtencin de diferencias
significativas, pruebas t de diferencia de medias y anlisis de la varianza (ANOVA) entre las
variables sociodemogrficas consideradas y las puntuaciones de los instrumentos, con post
hoc, para comprobar las diferencias por pares.
El anlisis estadstico se realiz con un 95% de intervalo de confianza (p<.05), para la
gestin de los datos hemos empleado la aplicacin informtica IBM SPSS 19.0 Statistics.
Resultados
Estudio descriptivo
En la Tabla 1, se presentan las puntuaciones medias, desviaciones tpicas y fiabilidad
obtenida en nuestro estudio para las distintas dimensiones analizadas en los dos instrumentos.
Tabla 1
Medias, desviaciones tpicas y fiabilidad de las escalas del estudio
EQi-YV
Estado general de nimo
Adaptabilidad
Control de las emociones
Interpersonal
Intrapersonal
PANASN
Afectos negativos
Afectos positivos
Media
Desviacin tpica
de Cronbach
45.37
29.69
27.76
39.22
15.62
5.96
4.86
5.39
5.12
2.79
.84
.77
.65
.70
.62
18.0
23.90
3.25
2.61
.65
.72
978-84-695-8363-0
1544
Tabla 2
Prueba de diferencias de medias entre centros y escalas
Escalas de los instrumentos
EQi-YV
Estado general de nimo
Adaptabilidad
Control de las emociones
Interpersonal
Intrapersonal
PANASN
Afectos negativos
Afectos positivos
Centro 1
n = 64
Centro 2
n = 68
Media (DT)
Media (DT)
44.28 (5.76)
29.03 (4.94)
26.93 (4.92)
38.95 (5.03)
15.84 (2.87)
17.79 (3.28)
23.95 (2.49)
46.39 (6.007)
30.32 (4.75)
28.54 (4.75)
39.48 (5.23)
15.42 (2.71)
-2.062
-1.532
-1.723
-.595
.857
.041*
.128
.087
.553
.393
18.19 (3.22)
23.86 (2.74)
-.695
.187
.488
.852
* p <.05.
Tan slo hemos encontrado diferencias significativas en una de las escalas, la escala
Estado general de nimo del EQi-YV [t(130)=-2.006, p<.05], siendo esta diferencia favorable
al segundo de los centros (Centro 2). No se aprecia significatividad en ninguna otra escala de
los instrumentos utilizados con respecto a la variable sociodemogrfica centro educativo
(p.>05 ns.).
Afectos positivos
Hombres
(n = 64)
Mujeres
(n = 68)
Media (DT)
Media (DT)
46.14 (6.17)
30.54 (5.24)
29.35 (5.27)
38.54 (4.83)
15.85 (2.75)
44.64 (5.70)
28.89 (4.37)
26.26 (5.10)
39.86 (5.33)
15.41 (2.82)
1.444
1.967
3.426
-1.487
.920
.151
.051
.001*
.139
.359
17.79 (3.08)
18.19 (3.41)
-.695
.488
23.48 (2.63)
24.35 (2.55)
-1.825
.070
* p <.05
978-84-695-8363-0
1545
Curso
4 curso
5 curso
6 curso
4 curso
5 curso
6 curso
4 curso
5 curso
6 curso
4 curso
5 curso
6 curso
4 curso
5 curso
6 curso
4 curso
5 curso
6 curso
4 curso
5 curso
6 curso
n
43
41
48
43
41
48
43
41
48
43
41
48
43
41
48
43
41
48
43
41
48
Media (DT)
45.46 (5.59)
46.56 (5.49)
44.27 (6.56)
30.93 (4.42)
29.48 (5.09)
28.77 (4.91)
28.30 (5.62)
26.75 (6.03)
28.14 (4.54)
38.41 (4.91)
39.90 (5.53)
39.37 (4.94)
15.76 (2.51)
15.80 (3.05)
15.35 (2.83)
18.11 (3.36)
18.12 (3.25)
17.79 (3.19)
24.13 (2.48)
23.78 (2.76)
23.81 (2.64)
F
1.654
gl
2-129
p
.195
2.332
2-129
.101
1.050
2-129
.353
.910
2-129
.405
.363
2-129
.696
.153
2-129
.858
.246
2-129
.782
Discusin
El presente trabajo proporciona evidencias empricas sobre el estudio de la
inteligencia emocional percibida y los afectos en Educacin Primaria, sirviendo las mismas
para interpretar las competencias, habilidades emocionales y sociales, as como los afectos de
la poblacin escolar en nuestro contexto. Algunos estudios con muestras similares a la nuestra
tampoco han encontrado diferencias significativas en las puntuaciones obtenidas en
inteligencia emocional medida a travs de autoinformes, en funcin de la variable
sociodemogrfica sexo, incluso tras el fin de la escolaridad obligatoria (Extremera,
Fernndez-Berrocal, y Salovey, 2006; Mestre, Guil, Lopes, Salovey y Gil-Olarte, 2006,
Molero, Ortega-lvarez, Moreno, 2010). Parece ser que estas discrepancias se agudizan desde
el inicio de la adolescencia siendo favorables a las mujeres que tienen mayores capacidades
978-84-695-8363-0
1546
para percibir las emociones por la mayor subordinacin social a la que han sido sometidas
(Keltner, Gruenfeld y Andersen, 2003).
En nuestro caso, la escala Control de las emociones ha sido la nica en la que hemos
encontrado diferencias significativas en el EQi-YV en funcin del sexo. Hemos comprobado
que, en el resto de variables sociodemogrficas (centro y curso), no se han apreciado
diferencias significativas, algo que puede estar provocado para la similitud entre el perfil de
los estudiantes de los dos centros al ser de la misma localidad y el parecido en la edad de los
sujetos de la muestra. As queda de manifiesto en los baremos de correccin del EQ-i:YV en
su versin espaola (Ferrndiz et al., 2012), en los cuales aparecen los mismos percentiles
para las tres edades de la muestra (9 a 12 aos).
En relacin a los afectos, no hemos encontrado diferencias significativas en funcin de
las variables sociodemogrficas. De forma similar a otros estudios (Sandn et al., 1999) es
necesario considerar que al igual que las emociones, en general, los afectos son estados
mentales y afectivos que comprenden sentimientos, cambios fisiolgicos, expresiones
corporales y tendencias a actuar de una manera especfica (Frijda, Manstead, & Bem, 2000).
Los afectos positivos, en particular, son aquellos en los que predomina el bienestar (Lucas,
Diener, & Larsen, 2003. Las emociones positivas favorecen un razonamiento eficiente,
flexible y creativo. Un razonamiento de este tipo es predictor de un aprendizaje significativo
y, por tanto, de un buen rendimiento acadmico (Oros, 2009). Siempre que sea posible, se
recomienda aprovechar el contexto escolar como centro de intervencin. Se sugiere planificar
actividades didcticas, estructuradas, con un propsito definido, integradas al currculo
escolar para obtener de ellas todo el beneficio posible. Las mismas deberan implementarse
sistemticamente en el horario habitual de clases.
No queremos finalizar nuestro estudio sin reflexionar sobre la importancia de trabajar
la formacin integral del alumnado, en la que debemos incluir el mundo afectivo y el
emocional de los mismos; este es el objeto de la educacin y el que los docentes, desde los
centros educativas, deben lograr.
Referencias
Bar-On, R., y Parker, J. D. A. (Eds.) (2000). The handbook of emotional intelligence. Theory,
development, assessment, and application at home, school, and in the workplace. San
Francisco, Ca: Jossey-Bass.
Extremera, N., Fernndez-Berrocal, P. y Salovey, P. (2006). Spannish version of the MayerSalovey-Caruso Emotional Intelligence Test (MSCEIT). Versin 2.0: realiabilities, age
and gender differences. Psicothema, 18, 42-48.
Ferrndiz, C., Hernndez, D., Bermejo, R., Ferrando, M. y Sinz, M. (2012). La inteligencia
emocional y social en la niez y adolescencia: validacin castellana de un instrumento
para su medida. Revista de Psicodidctica, 17(2), 309-339.
Frijda, N. H., Manstead, A. S. R., & Bem, S. (2000). Emotions and beliefs. How feelings
influence thoughts. Cambridge, UK: Cambridge University Press.
Keltner, D., Gruenfeld, D. y Andersen, C. (2003). Power, approach and inhibition.
Psychological Review, 110(2), 265-284.
978-84-695-8363-0
1547
Lucas, R. E., Diener, E., & Larsen, R. J. (2003). Measuring positive emotions. In S. J. Lopez
& C. R. Zinder (Eds.), Positive psychological assessment. A handbook of models and
measures. Washington, DC: American Psychological Association.
Mestre, J. M., Guil, R., Lopes, P., Salovey, P. y Gil, P. (2006). Emotional intelligence and
social and academic adaptation to school. Psicothema, 18, 112-117.
Molero, D. (2009, septiembre). Emotional competences of teachers during their initial
education. Gender differences in role. Trabajo presentado en el Second International
Congress on Emotional Intelligence. Santander, Universidad de Cantabria.
Molero, D. y Ortega-lvarez, F. (2011). Inteligencia emocional autoinformada en escolares
de Educacin Primaria. Revista Electrnica de Investigacin y Docencia, 6, 47-61.
Molero, D., Ortega-lvarez, F. y Moreno, R. (2010). Diferencias en la adquisicin de
competencias emocionales en funcin del gnero. Revista Electrnica de Investigacin
y Docencia, 3, 165-172.
Oros, L. (2009). El valor adaptativo de las emociones positivas. Una mirada al
funcionamiento psicolgico de los nios pobres. Revista Interamericana de Psicologa,
43(2), 288-296.
Palomera, R., Fernndez-Berrocal, P. y Brackett, M. A. (2008). La inteligencia emocional
como competencia bsica en la formacin inicial de los docentes: algunas evidencias.
Revista Electrnica de Investigacin Psicoeducativa, 6(2), 437-454.
Pena, M., Extremera, N. y Pacheco, L. (2011). El papel de la inteligencia emocional percibida
en la resolucin de problemas sociales en los adolescentes. Revista Espaola de
Orientacin y Psicopedagoga, 22(1), 69-79.
Sandn, B. (2003). Escalas Panas de Afecto Positivo y Negativo para nios y adolescentes
(PANASN). Revista de Psicopatologa y Psicologa Clnica, 8(2), 173-182.
Sandn, B., Chorot, R., Lostao, L., Joiner, T.E., Santed, M.A., y Valiente, R.M. (1999).
Escalas PANAS de afecto positivo y negativo: validacin factorial y convergencia
transcultural. Psicothema, 11(1), 37-51.
Watson, D., Clark, L.A., y Tellegen, A. (1988). Development and validation of brief measures
of positive and negative affect: The PANAS scales. Journal of Personality and Social
Psychology, 54, 1063-1070.
978-84-695-8363-0
1548
Resumen
Este trabajo presenta un estudio sobre el nivel de satisfaccin general con la vida de una
muestra de estudiantes universitarios. Se establece un modelo predictivo a partir de diversas
variables independientes entre las que destacan: sentido vital, autoestima, nivel de estudios,
valoraciones sobre el trabajo, la salud, las relaciones familiares y sociales, el estrs y su
afrontamiento, redes de apoyo y competencias emocionales. Adems de presentar los
resultados en cada una de las variables evaluadas, se analizan las correlaciones ms
destacadas y se realiza un anlisis de regresin paso a paso (stepwise) que identifica un
conjunto de variables que explican el 64% de la satisfaccin con la vida. La muestra est
constituida por 609 estudiantes de grados y mster de diversas universidades catalanas y
aragonesas. Es una muestra mayoritariamente femenina (81,1%) con edades oscilan entre los
18 y 67 aos siendo la edad media de 31 aos.
Introduccin
La satisfaccin con la vida es un campo de investigacin que tom relevancia a partir
de los aos setenta cuando el concepto de calidad de vida evolucion y empez a concebirse
desde una dimensin psicosocial ms all de las condiciones necesarias para una buena vida
(alimentacin, vivienda y cuidados mdicos suficientes, entre otros). As la satisfaccin con la
978-84-695-8363-0
1549
Mtodo
Muestra
En el estudio han participado un total de 609 estudiantes de grado y Mster de las
Facultades del rea de educacin de diversas universidades catalanas y aragonesas. El grupo
de estudiantes estaba compuesto por 113 hombres y 494 mujeres, con una edad media de
30,98 (SD = 9.88). La mayora de los estudiantes, el 71,8% trabajaban durante el estudio y
solo el 14,3 % manifiesta estar en desempleo.
Instrumentos
Escala de Satisfaccin con la Vida (SWLS) (Diener, Emmons, Larsen y Griffin,
1985). Coincidimos con Vazquez et al. (2012) en que el SWLS es probablemente la medida
de satisfaccin vital ms citada en la literatura cientfica. Consiste en un conjunto de 5
afirmaciones frente a las cuales las personas deben indicar su nivel de acuerdo o desacuerdo
en una escala tipo Likert de 7 puntos. Las buenas propiedades psicomtricas de la SWLS han
sido confirmadas durante los ltimos veinte aos y hay trabajos recientes (Diener y Gonzlez,
2011; Pavot y Diener, 2008) que resumen de modo muy completo estos estudios. En ellos se
ha demostrado una alta consistencia interna de la escala, con coeficientes alfa de Cronbach
oscilando de .79 a .89 (Blais, Vallerand, Pelletier, y Briere, 1989; Diener, et al., 1985; Pavot,
Diener, Colviny y Sandvik, 1991). De acuerdo con el trabajo de Vzquez, Duque y Hervs
(2012) existe suficiente evidencia emprica acerca de la validez de la SWLS incluso en
muestras espaolas (Atienza, Pons, Balaguer y Garca-Merita, 2000).
Cuestionario de desarrollo emocional de Adultos (CDE-A) (Prez-Escoda, Bisquerra,
Filella y Soldevila, 2010). Se trata de un cuestionario de autoinforme basado en el marco
978-84-695-8363-0
1550
Procedimiento
Durante los aos 2009 y 2010 se invito a los estudiantes de las diversas universidades
participantes a colaborar de forma voluntaria en un estudio sobre la satisfaccin con la vida i
las competencias emocionales. Todos los estudiantes completaron los cuestionarios on-line
siguiendo las instrucciones facilitadas previamente por los investigadores. Las respuestas
fueron totalmente annimas para reducir la influencia de la deseabilidad social.
Resultados
De acuerdo con los resultados que podemos observar en la Tabla 1 puede observarse
que la satisfaccin con la vida de los participantes en el estudio se sita en 24,43 puntos,
lo que significa que poseen un nivel medio de satisfaccin. De forma parecida el nivel de
competencia emocional total es medio destacando un buen nivel en las dimensiones
conciencia y competencia de vida y bienestar. En las dems variables tambin se observa un
nivel medio tendiendo a alto excepto.
978-84-695-8363-0
1551
Tabla 1
Estadsticos descriptivo de las variables del estudio
Variable
Total
S.D.
24,43
6,49
7,29
5,86
6,43
5,87
7,35
5,39
5,15
1,04
1,22
1,36
1,22
1,40
1,13
1,43
609
609
609
609
609
609
609
609
24,52
6,50
7,36
5,82
6,48
5,84
7,36
5,43
5, 20
1,05
1,21
1,36
1,24
1,39
1,12
1,45
494
494
494
494
494
494
494
494
23,98
6,45
6,99
6,05
6,21
5,98
7,29
5,23
5,01
,985
1,23
1,31
1,12
1,43
1,18
1,35
113
113
113
113
113
113
113
113
4,67
1,33
609
4,64
1,37
494
4,76
1,15
113
5,26
5,00
5,16
5,27
5,40
5,28
4,41
5,39
5,14
3,80
5,44
5,54
5,30
4,88
1,44
1,62
1,43
1,61
1,34
1,30
1,70
1,48
1,89
1,65
1,41
1,38
1,19
1,32
609
609
609
609
609
609
609
609
609
609
609
609
609
609
5,22
4,96
5,13
5,30
5,45
5,25
4,38
5,39
5,20
3,86
5,43
5,55
5,27
4,90
1,46
1,60
1,47
1,60
1,32
1,30
1,69
1,51
1,93
1,64
1,43
1,41
1,21
1,32
494
494
494
494
494
494
494
494
494
494
494
494
494
494
5,43
5,13
5,27
5,12
5,16
5,37
4,52
5,37
4,92
3,56
5,51
5,49
5,40
4,75
1,35
1,50
1,2
1,61
1,40
1,27
1,74
1,36
1,70
1,69
1,29
1,30
1,12
1,32
113
113
113
113
113
113
113
113
113
113
113
113
113
113
Medi
a
Mujeres
Media S.D.
Varones
Media S.D.
978-84-695-8363-0
1552
978-84-695-8363-0
1553
Tabla 2
Correlaciones entre SWLS, CDE_9-13 y otras variables estudiadas
1
t
2-CDE_A
3-CE
4-RE
5-CS
,23**
,12
,69**
**
**
,19
**
,15
,28
**
,56
**
,47
**
10-S
,50
**
11-ST
,53**
8-SV
9-ASE
,46
**
,53
**
,55
**
15- A
,62
**
16- SL
,45**
17- NE
**
12- RL
13- SF
14- RS
,52
**
18- P
,14
19-E
,25**
,47**
20- R
21-RA
22- I
23- IE
10
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
21
22
,58
,87
1
,47**
,83**
,57**
,57**
,83**
,43**
,71**
, 60**
,80**
,51
**
**
**
,62**
,12**
,09*
,05**
,06**
,16*
,64
,10*
,56
**
,31**
,22**
,31**
,22**
,21**
,02
,01
,05
-,04
,01
,05
,01
,06
,01**
,24**
,15**
,20**
,12**
**
,10
**
,04
**
,13
,25**
,07**
,02
,06
,11**
,15
**
,19
,20**
,08
,17
**
,20
**
,40**
,06
,40
,39**
,08
,36
,16**
,24**
**
**
,07
,10
,17
**
,14
,46
**
,38
,42
**
,64**
,30
,36
**
,51
**
1
,38
,34**
,40**
**
**
,34**
**
**
,48**
**
**
,601*
**
,23
**
,26**
,44
**
**
,34**
,29
,39
,02
,04**
,16**
-,02*
,31**
,14**
,12**
,22**
,33**
,02**
,22**
,24*
,17*
,27**
,15**
,10**
,23**
,26**
,14**
,12**
,20**
-,16*
,23**
,10**
,11**
,12**
,02**
,08*
,51*
,30**
,43*
,37*
,45*
,29**
,43**
,50*
,28**
,42**
,34*
,17**
,54**
,37**
,447*
,336*
,546*
,605*
,219*
,475*
,50**
,00
,06
**
,24
,40
**
**
,24
,38
**
-,03
,01
-,04
,18**
-,04
,26**
,03**
,06**
,03
-,03
,02
,01**
,13**
,05
,09*
,13**
,13**
,11**
,07
,12**
,10
,17
,46
,43**
,28**
,27**
,24**
,21**
,20
,26
,41
,53**
,088*
,28
,44
**
**
-,01
,10
,55
**
,42
,03**
,03
**
,45
,33
,05
,08
,26
**
,28
**
**
**
,38
**
,20
**
,02
,04
,27
**
**
**
,45**
,49
**
,18
7-CVB
**
6-AE
,38
,67
**
,43
**
,59
,25
,41
**
,48**
,40
,32
,55
,39
,30
,55
,48
,14
,36
**
,45
,59**
,39**
,40
,59
,38**
,43
,60
,25**
,06**
,198*
,20**
,50
,26
-,09*
,53
,55
,20**
,40
,17
,19**
,35
,47
1
1
,48**
Satisfaccin con la vida (SWLS), Total Competencia Emocional (QDE_A), Conciencia emocional (CE), Regulacin Emocional (RE), Competencia Social (CS), Autonomia emocional (AE), Competencias de vida y Bienestar (CVB),
Sentido vital (SV), Afrontamiento eficaz de las situaciones estresantes (ASE), Salud autopercibida (S), Satisfaccin con el trabajo (ST), Resiliencia autopercibida(RL), Satisfaccin con la situacin familiar (SF), Satisfaccin con las
relaciones sociales (RS), Autoestima (A), Seguridad Laboral (SL), satisfaccin con el nivel de estudios (NE), Problemas importantes (P), Estrs autopercibido (E), Responsabilidad (R), Redes de Apoyo (RA), Inteligencia
autopercibida(I) y Inteligencia Emocional autopercibida (IE).
N= 609
*p < .05
**p< .01
***p< .001
978-84-695-8363-0
1554
Tabla 3
Resumen del Modelo de regresin paso a paso (stepwise) para la prediccin de la satisfaccin con la
vida (SWLS)
Predictores en la ecuacion
Autoestima
Satisfaccin Trabajo
Familia
Sentido vital
Seguridad trabajo
Salud,
COMPVIDA
Relaciones Sociales
Estudios
Problemas
Redes Apoyo
,602
,393
,520
,583
,474
,399
,538
,395
,365
-,24
,298
,152
,123
,162
,162
,156
,111
,118
,103
,105
-,087
,080
R2
,390
,488
,540
,568
,587
,603
,616
,625
,631
,637
,640
387,38***
288,33***
237,16***
198,71***
171,37***
152,55***
137,63***
125,06***
114,02***
104,87***
96,35***
4,14***
3,43***
5,13***
5,02***
4,68***
3,69***
4,56***
2,99**
3,35***
-3,20***
2,16**
gl
608
608
608
608
608
608
608
608
608
608
608
Discusin y conclusiones
Los resultados obtenidos de los niveles de satisfaccin con la (SWLS) son muy
parecidos a los obtenidos en otras investigaciones con universitarios de otras comunidades
autnomas espaolas (Breva, Galindo, Gmez y Daz, 2011). En las otras variables
analizadas, los resultados apuntan unos niveles medio-altos. El estudio correlacional permite
observar que todas las variables consideradas se relacionan significativamente con la
satisfaccin con la vida. Sin embargo, algunos dominios correlacionan con fuerza y otros lo
hacen de forma insignificante por lo que se el estudio de regresin mltiple permiti analizar
con mayor precisin el peso de las mismas.
As, los dominios que nos permiten predecir la satisfaccin con vida de los
universitarios estaran focalizadas en once variables. Mayoritariamente coinciden con las
incluidas en Diener et al (1999). La primera de ellas tiene que ver con la autoestima que por s
sola explica un 39% la variabilidad total de la satisfaccin con la vida. La siguiente variable
con un gran peso es la satisfaccin en el trabajo. Esto puede estar relacionado con la
disponibilidad ingresos econmicos. Este dominio no se ha estudiado en esta ocasin y
debera incluirse en nuevos estudios de acuerdo a la revisin de trabajos de Veenhoven
(1994). La tercera de las variables es la satisfaccin con el entorno familiar seguida de
posesin de un claro sentido vital. Otros dominios importantes serian la autopercepcin de
salud, el nivel de competencias para la vida y el bienestar, la satisfaccin con las relaciones
sociales y con el nivel de estudios alcanzado. La experiencia de haber sufrido algn problema
importante en la vida, tambin contribuye a explicar la satisfaccin con la vida. Este aspecto
se interpreta como indicador de resiliencia que ha permitido al sujeto superar el problema y
salir resarcido del mismo. La ltima de las variables que contribuye a explicar la variabilidad
total de la satisfaccin con la vida es el disfrute de una red de relaciones sociales importante.
Contrariamente a nuestra sospecha inicial a excepcin de las competencias de vida y bienestar
no se incluyen en el modelo explicativo las dems dimensiones de la competencia emocional.
Ser necesario seguir investigando, tal vez con medidas que no sean pruebas de autoinforme.
Para profundizar en la hiptesis planteada tambin sera necesario realizar nuevos estudios en
los que se consideren otras variables como la edad, el gnero, el nivel o disponibilidad de
ingresos, entre otras. Paralelamente sera interesante realizar algunos estudios de regresin
978-84-695-8363-0
1555
jerrquicos para analizar el papel mediador de alguno de los dominios y llegar a una
prediccin ms precisa. En todo caso, el conocimiento de los 11 dominios puestos de
manifiesto en esta investigacin que contribuyen a explicar la satisfaccin con la vida, es un
hallazgo interesante en tanto que permite plantear acciones educativas encaminadas la
atencin y desarrollo de estos dominios, con vistas a generar un mayor bienestar subjetivo.
Inicialmente se desprende la necesidad fomentar desde la infancia un buen nivel de
autoestima y de incidir en el desarrollo de competencias sociales y para la vida y el bienestar.
Referencias
Atienza, F. L., Pons, D., Balaguer I., y Garca-Merita, M. L. (2000). Propiedades psicomtricas
de la Escala de Satisfaccin con la Vida en adolescentes. Psicothema, 12, 331-336.
Blais, M. R., Vallerand, R. J., Pelletier, L. G., y Briere, N. M. (1989). LEchelle de Satisfaction
de Vie: validation canadienne-francaise du satisfaction with life scale. Canadian
Journal of Behavioral Science, 21, 210-223.
Bisquerra, R., y Prez, N. (2007). Las competencias emocionales. Educacin XXI, 10, 61-82.
Breva, A., Galindo, M.P., Gmez E. y Daz, J. M. (2011) La excesiva atencin emocional se
relaciona con el bienestar subjetivo?: Algunos datos empricos acerca del papel
mediador de la regulacin emocional en dicha relacin. Actas del II Congreso
internacional de Inteligencia emocional: 20 aos de investigacin y desarrollo.
Santander: Fundacin Botin.
Diener, E. (1984). Subjective well-being. Psychological Bulletin, 95, 542-575.
Diener, E., Emmons, R., Larsen, R. J., y Griffin, S. (1985). The satisfaction with life scale.
Journal of Personality Assessment, 49, 71-75.
Diener, E., Suh, E. M., Lucas, R. E., y Smith, H. L. (1999). Subjective well-being: three
decades of progress. Psychological Bulletin, 125, 276-302.
Diener, E., y Gonzlez, E. (2011). The validity of life satisfaction measures. Social Indicator
Network News, 108, 1-5.
Prez-Escoda, N., Bisquerra, R., Filella, G., y Soldevila, A. (2010). Construccin del
cuestionario de desarrollo emocional de adultos (QDE-A). REOP, 21(2), 367-379.
Pavot, W., y Diener, E. (2008). The satisfaction with life scale and the emerging construct of
life satisfaction. Journal of Positive Psychology, 3, 137-152.
Pavot, W., Diener, E., Colvin, C. R.,y Sandvik, E. (1991). Further validation of the Satisfaction
with Life Scale: evidence for the cross-method convergence of well-being. Social
Indicators Research, 28, 1-20.
Rojas, M. (2006). Life satisfaction and satisfaction in domains of life: is it a simple or a
simplified relationship? Journal of Happiness Studies, 7(4), 467-497.
978-84-695-8363-0
1556
Vzquez C; Duque, A. y Hervs G. (2012). Escala de Satisfaccin con la Vida (SWLS) en una
muestra representativa de espaoles adultos: validacin y datos normativos. Disponible
en:
http://pendientedemigracion.ucm.es/info/psisalud/carmelo/PUBLICACIONES_pdf/2012SWLS_Normative_data_copia.pdf
Veenhoven R. (1994). El estudio de la satisfaccin con la vida. Intervencin Psicosocial, 3, 87116.
978-84-695-8363-0
1557
Resumen
El propsito de esta investigacin ha sido analizar el uso de competencias de investigacin e
innovacin educativa por el profesorado de Educacin Primaria en su prctica profesional,
partiendo de las establecidas en el actual Grado de Educacin Primaria de la Universidad de
Murcia. Para ello, se ha utilizado un cuestionario dirigido a 195 maestros y maestras en activo
de la Comunidad Autnoma de la Regin de Murcia. El profesorado de Educacin Primaria
afirma aplicar competencias de investigacin e innovacin educativa frecuentemente en su
prctica profesional, coincidiendo a nivel global en sus apreciaciones. Asimismo, otorga un
grado de importancia bastante bajo a las competencias que no practica porque no las posee, si
bien, en esta ocasin, se aprecia una dispersin muy alta entre sus opiniones. En relacin a las
variables personales y profesionales analizadas, nicamente se han encontrado diferencias
significativas en lo que respecta al ciclo en el que imparte docencia.
978-84-695-8363-0
1558
Introduccin
Hasta la incorporacin de las universidades espaolas al Espacio Europeo de Educacin
Superior (EEES), los estudiantes universitarios han venido cursando una gran variedad de
asignaturas, que constituyen un conjunto de conocimientos, pero, de forma general, han obtenido
sus correspondientes ttulos sin haber desarrollado competencias propias de la investigacin
(Ozay, 2012). Actualmente, en la nueva configuracin de los ttulos de Grado, la iniciacin a la
investigacin y la innovacin es comnmente requerida como competencia transversal para ser
adquirida por todos los estudiantes universitarios. Adems, prcticamente en la totalidad de planes
de estudio de los Grados impartidos en Facultades de Educacin de las universidades espaolas,
se incorpora la investigacin e innovacin educativa como una asignatura, generalmente de
formacin bsica, que, con distintas denominaciones, han de cursar los estudiantes.
Concretamente en el Grado de Educacin Primaria, la integracin de asignaturas
relacionadas con la investigacin y la innovacin en educacin, pretende que los futuros
maestros y maestras sean capaces de indagar sobre su propia prctica, reflexionando
crticamente sobre la misma en un ambiente colaborativo. De esta forma, la investigacin y la
innovacin constituyen un potencial valioso en la formacin del profesorado (Dobber et al,
2012), en la medida en que pueden convertirse en potentes estrategias de desarrollo profesional
capaces de catalizar el cambio educativo para proporcionar una mejora continua en la calidad de
los procesos de enseanza y aprendizaje y responder a las demandas cientficas y tecnolgicas
del siglo XXI.
El hecho de que el profesorado tenga que poseer competencias de investigacin para
desarrollar su prctica profesional no es algo novedoso. Esta necesidad ya empez a plantearse
muchos aos atrs por las implicaciones que ello conlleva (Reed, 1962), si bien en la actualidad,
los futuros maestros y maestras han de adquirir mayor sofisticacin en la prctica real de la
exploracin cientfica y el razonamiento, pudiendo recurrir a diferentes formas de colaboracin
para el aprendizaje de competencias de investigacin (Drayton y Falk, 2006) y para adquirir una
actitud positiva hacia la misma (Linden et al, 2012), que incluyen la utilizacin de herramientas
informticas para apoyar dicho aprendizaje (Shimoda, White y Frederiksen, 2002).
De entre todos los enfoques de investigacin educativa, destacamos el de investigacinaccin como el ms apropiado para ser utilizado por el profesorado de Educacin Primaria y el
que ms resultados positivos puede llegar a producir (Elliot, 1993; Kemmis y McTaggart, 1988;
Blandez et al., 2004; Cain y Milovic, 2010; Hagevik, Aydeniz y Rowell, 2012). Su finalidad es
mejorar la educacin a travs de cambios que ayuden a los profesionales a ser ms consciente de
su prctica, ms crticos con sus acciones y ms proclives al cambio. Esta modalidad de
investigacin, entendida como un proceso y no como un producto (Clarke y Fournillier, 2012),
permite reflexionar sobre la prctica educativa para estar en constante evolucin y, si adems se
realiza con el apoyo emocional y los conocimientos de otros colegas, la investigacin desde la
propia accin educativa se revela esencial para el desarrollo profesional de los docentes
(Vzquez-Bernal et al, 2012). Todo ello representa un proceso de aprendizaje orientado a la
construccin de un maestro reflexivo (Schn, 1998), crtico (Carr, 1990), intelectual
transformativo (Giroux, 1990) e investigador (Stenhouse, 1996), para lo cual es necesario haber
adquirido una formacin acadmica de calidad (Felicetti, 2011).
Respecto a las competencias de investigacin, los estudiantes suelen tener ideas errneas
sobre los procesos de investigacin cientfica, pero estas ideas cambian cuando se produce una
participacin directa en actividades de investigacin. Entre estas ideas preconcebidas se incluye
978-84-695-8363-0
1559
la creencia de que la investigacin autntica es una actividad solitaria (Cartrette y MelroeLehrman, 2012). En este sentido, algunos autores han sealado la existencia de importantes
vnculos entre la investigacin docente, la colaboracin y el cambio educativo (Hargreaves,
1996; Hernndez y Feliciano, 2005; Butler y Schnellert, 2012). Por otra parte, las competencias
de investigacin, como cualquier tipo de competencia compleja, no se terminan de desarrollar
nunca (Garca Sanz, 2011), por lo que se requiere, adems de una slida formacin inicial,
tambin una formacin permanente, sin menoscabo de que en el propio trabajo se puedan
reforzar dichas competencias o aprender otras para ser capaz de resolver los problemas
prcticos que van surgiendo (Lottero-Perdue y Brickhouse, 2002).
Incorporar la investigacin en los centros de Educacin Primaria contribuye a mejorar el
aprendizaje del alumnado y la eficacia profesional, bien dentro del aula o mediante una formacin
experiencial (Marlow, 2011). Adems, el profesor que ejerce su enseanza aplicando procesos de
investigacin e innovacin educativa, transmite a sus alumnos el inters por aprender mediante la
indagacin y el descubrimiento. De esta forma nacen los denominados alumnos como
investigadores (Fielding, 2004), dentro del movimiento conocido por el nombre de la voz del
alumnado (Fielding, 2011), mediante el cual, los estudiantes, animados por sus profesores, tienen
la oportunidad de participar en cuestiones escolares que les preocupan, convirtindose en agentes
activos de cambio y mejora de la comunidad (Rojas, Haya y Lzaro-Visa, 2012).
En un estudio anterior analizamos la aplicacin acadmica de las competencias de
investigacin que realizan los alumnos en el Grado de Educacin Primaria (Garca Sanz,
Belmonte y Morillas, 2012). El propsito de la presente investigacin ha sido analizar el uso de
competencias de investigacin e innovacin educativa por los maestros y maestras de Educacin
Primaria en su prctica profesional, partiendo de las establecidas en el actual Grado de Educacin
Primaria de la Universidad de Murcia. Los objetivos especficos han sido los siguientes:
1. Conocer el grado de ejecucin real de competencias de investigacin e innovacin en las
aulas de Educacin Primaria.
2. Observar el grado de importancia que otorga el profesorado de Educacin Primaria a las
competencias de investigacin e innovacin que no practica porque no las tiene adquiridas.
3. Analizar el nivel de aplicacin de competencias de investigacin en funcin de las siguientes
variables de los maestros y maestras: sexo, edad, aos de experiencia, ciclo en el que imparte
docencia, especialidad, tipo de centro y pertenencia al equipo directivo.
Mtodo
En la investigacin han participado un total de 195 maestros y maestras de 16 centros de
la Comunidad Autnoma de la Regin de Murcia. El criterio de inclusin ha sido formar parte
del colectivo de profesionales que imparten docencia en los centros de Prcticas de Educacin
Infantil y Primaria asignados al grupo de profesores universitarios, autores de este estudio. El
instrumento de recogida de informacin utilizado ha sido un cuestionario que, tras una serie de
datos personales y profesionales, integra 12 preguntas dobles cerradas con una escala tipo Likert
de 5 grados. Adems, el cuestionario incluye una pregunta abierta al final del mismo para que el
profesorado pueda aadir cualquier comentario en relacin a la utilizacin de las competencias
de investigacin e innovacin educativa en su aula o centro (ver anexo I). En la investigacin se
ha aplicado el mtodo cuantitativo descriptivo, de acuerdo con el siguiente procedimiento:
978-84-695-8363-0
1560
Resultados
Seguidamente, se presentan los resultados obtenidos en la investigacin, en funcin de
los objetivos establecidos en la misma. En relacin al grado de ejecucin de competencias de
investigacin e innovacin en los centros de Educacin Primaria -primer objetivo-,
globalmente, el profesorado indica aplicar dichas competencias frecuentemente (=3,76),
presentando un coeficiente de variacin de CV=12,37, lo cual indica una dispersin entre los
datos aceptable. Asimismo, en la Tabla 1 se muestran algunos estadsticos que describen el
nivel de utilizacin de cada una de las competencias.
Tabla 1
Estadsticos del grado de aplicacin de las competencias de investigacin e innovacin
Competencias
Mnimo
Mximo
Media
Desviacin
tpica
188
3,98
,670
191
4,25
,580
191
4,12
,774
188
3,17
1,069
191
4,36
,546
193
4,39
,637
191
3,86
,891
189
3,71
,945
189
3,31
1,175
188
2,54
1,097
978-84-695-8363-0
innovadoras realizadas.
C11: Trabajar en equipo en el
quehacer diario para resolver
problemas y tomar decisiones.
C12: Realizar experiencias de
innovacin y/o investigacin durante
la prctica profesional.
1561
191
4,10
,738
184
3,38
,987
4,25
4
3,98
4,36
4,39
4,12
4,10
3,85
Media
3,71
3,38
3,31
3,17
2,54
2
C1
C2
C3
C4
C5
C6
C7
C8
C9
C10
C11
C12
978-84-695-8363-0
1562
Tabla 2
Estadsticos del grado de importancia de las competencias no adquiridas
Competencias
Mnimo
Mximo
Media
Desviacin
tpica
31
1,79
1,300
18
1,71
1,127
15
1,64
1,121
30
1,64
1,137
15
1,64
1,121
14
1,43
,756
23
1,57
1,164
20
1,86
1,191
28
1,57
1,197
39
1,93
1,199
14
1,64
1,008
29
1,86
1,243
De los 195 docentes que han participado en el estudio, nicamente el 11,79% de media
ha admitido no practicar nunca o rara vez alguna de las competencias recogidas en el bloque
de Investigacin, integrado en la gua docente de la asignatura Investigacin y TIC. De
todas ellas, este porcentaje de maestros y maestras seala que debera tener adquiridas un
poco las siguientes: realizar exposiciones orales para mostrar las actividades innovadoras
realizadas, realizar experiencias de innovacin y/o investigacin durante la prctica
profesional y analizar la informacin mediante tcnicas cuantitativas o cualitativas para su
interpretacin. Dentro de las bajas valoraciones, estas tres competencias no practicadas por
el profesorado son a las que ste otorga una mayor importancia. Por el contrario, la
competencia menos valorada por los docentes ha sido: formular los objetivos que se
pretenden conseguir con la actividad docente. Los maestros y maestras de Educacin
Primaria que no posees esta competencia opinan que apenas es necesaria para desempear sus
actividades de investigacin e innovacin dentro de su prctica docente. Como se aprecia en
la Tabla 2, la dispersin en las valoraciones de todas las competencias es muy alta, oscilando
978-84-695-8363-0
1563
Media
2
1,79
1,71
1,93
1,86
1,64
1,64
1,64
1,43
1,57
1,86
1,64
1,57
C1
C2
C3
C4
C5
C6
C7
C8
C9
C10
C11
C12
Sexo
Edad
Aos de
experiencia
Ciclo
Especialidad
Grupos
Hombre
Mujer
Menos 25
25-35
36-45
46-55
Mas 55
Menos 5
5-10
11-20
21-30
Ms 30
1
2
3
Ed. Primaria
Frecuencia
53
140
4
62
45
54
28
31
42
41
42
36
53
38
39
77
Media
3,78
3,76
3,50
3,70
3,74
3,81
3,89
3,67
3,71
3,69
3,84
3,91
3,73
3,57
3,83
3,82
Sig. estadstica
,828
,260
,119
,045
,170
Tipo de centro
Equipo directivo
Ed. Musical
Ed. Fsica
Ingls
Francs
Ed. Especial
Otras
Pblico
Concertado
Si
No
Anteriormente
978-84-695-8363-0
12
15
22
5
21
17
145
48
20
145
13
1564
3,88
3,73
3,63
3,47
3,80
3,58
3,76
3,79
3,94
3,74
3,81
,580
,183
Discusin
La investigacin e innovacin en educacin permite que los maestros y maestras sean
capaces de indagar sobre su propia prctica, reflexionando crticamente sobre sta en un ambiente
colaborativo, lo cual repercute directamente en la mejora de su desarrollo profesional. Por ello, la
formacin inicial de este colectivo en competencias, especialmente de investigacin-accin, se
hace del todo necesaria para construir un profesorado reflexivo, crtico, proclive al cambio y
amante de la calidad educativa. Adems, el docente investigador e innovador, transmite el inters
a sus alumnos por aprender mediante el descubrimiento y la resolucin de problemas, pudiendo
incluso crear estudiantes investigadores, responsables de lo que ocurre a su alrededor, lo que
contribuye a su preparacin como ciudadanos de una sociedad democrtica.
En este estudio, a nivel global, los docentes explicitan aplicar frecuentemente dichas
competencias. nicamente el 11,79% ha admitido practicar una o ms de ellas nunca o rara vez,
no percibiendo la necesidad de adquirirlas. Esto indica que la mayora de los maestros y maestras
utilizan competencias de investigacin e innovacin educativa porque les son de utilidad en sus
procesos de enseanza y aprendizaje, lo cual conlleva un replanteamiento de los crditos
asignados a esta temtica en la formacin inicial del profesorado de Educacin Primaria.
Referencias
Blandez, J., Gonzlez, V., Lpez, A. y Sierra, M.A. (2004). La formacin de profesores
responsables a travs de la investigacin-accin. Revista de Investigacin Educativa,
22(2), 417-441.
Butler, L.D. y Schnellert, L. (2012). Collaborative inquiry in teacher professional
development. Teaching And Teacher Education, 28(8), 1206-1220.
Cain, T. y Milovic, S. (2010) Action research as a tool of professional development of advisers
and teachers in Croatia. European Journal of Teacher Education, 33(1), 19-30.
978-84-695-8363-0
1565
978-84-695-8363-0
1566
978-84-695-8363-0
1567
ANEXO I
Este cuestionario tiene como finalidad recoger informacin sobre la utilizacin de competencias de investigacin e innovacin
educativa aplicadas a la prctica profesional en la etapa de Educacin Primaria.
Por favor, tras contestar a las cuestiones de ndole personal y profesional que se muestran, responda a las preguntas que
se presentan en funcin de la siguiente interpretacin de la escala:
1: Nada/Nunca
2: Poco/Rara vez
3: Regular/Algunas veces
4: Bastante/Frecuentemente
5: Mucho/Siempre
Cumplimente la segunda parte de cada tem (no lo hago porque) nicamente en el caso de que en la primera parte del
mismo haya respondido con un 1 con un 2. Asimismo, puede utilizar el apartado de observaciones final para matizar o hacer
los comentarios que considere pertinentes en relacin al tema tratado.
2.
3.
58
Sexo:
1. Hombre
2. Mujer
Edad:
1. Menos de 25 aos
2. Entre 25 y 35 aos
3. Entre 36 y 45 aos
4. Entre 46 y 55 aos
5. Ms de 55 aos
Aos de experiencia:
En este cuestionario se utiliza el masculino genrico para referirse indistintamente a ambos sexos.
4.
5.
6.
7.
1. Menos de 5 aos
2. Entre 5 y 10 aos
3. Entre 11 y 20 aos
4. Entre 21 y 30 aos
5. Ms de 30 aos
978-84-695-8363-0
1568
1. Primero
2. Segundo
3. Tercero
Especialidad
1.Primaria
2.Educacin Musical
3.Educacin Fsica
4.Ingls
5.Francs
6.Educacin Especial
7.Otras__________________________
Tipo de Centro:
1.Pblico
2.Concertado
3.Privado
1.Si
2.No
978-84-695-8363-0
ITEM
1. Analizo y conozco los procesos educativos relativos al perodo de 6-12 aos.
No lo hago porque no s hacerlo, pero debera tener adquirida esta competencia
2. Reflexiono y soy crtico con mi comportamiento docente y procuro tener una formacin cientfica y
pedaggica actualizada.
No lo hago porque no s hacerlo, pero debera tener adquirida esta competencia
3. Realizo bsquedas bibliogrficas de una o varias fuentes (Internet, libros, revistas) para ampliar mi
formacin y mantenerme actualizado.
No lo hago porque no s hacerlo, pero debera tener adquirida esta competencia
4. Cuando redacto algn escrito en el que he consultado fuentes bibliogrficas, reseo las citas dentro y al
final del texto de acuerdo a normas establecidas (APA, Vancouver).
No lo hago porque no s hacerlo, pero debera tener adquirida esta competencia
5. Cuando surgen problemas en mi prctica profesional, procuro resolverlos de forma organizada
valindome de la informacin necesaria.
No lo hago porque no s hacerlo, pero debera tener adquirida esta competencia
6. Formulo los objetivos que pretendo conseguir en mi actividad docente para tener claro el propsito que
persigo.
No lo hago porque no s hacerlo, pero debera tener adquirida esta competencia
7. Elaboro y aplico instrumentos de recogida de informacin (cuestionarios, entrevistas, tcnicas de
observacin, pruebas de rendimiento) para obtener los datos que preciso.
No lo hago porque no s hacerlo, pero debera tener adquirida esta competencia
8. Analizo la informacin recogida mediantes tcnicas cuantitativas o cualitativas para poder interpretarla
debidamente.
No lo hago porque no s hacerlo, pero debera tener adquirida esta competencia
9. Redacto informes en relacin a las actividades realizadas durante mi prctica profesional para comunicar
y difundir los resultados de mi trabajo.
No lo hago porque no s hacerlo, pero debera tener adquirida esta competencia
10. Realizo exposiciones orales a mis compaeros de centro, inspector, otros compaeros, jornadas, etc.
para que conozcan las actividades realizadas por m.
No lo hago porque no s hacerlo, pero debera tener adquirida esta competencia
11. Trabajo en equipo en mi quehacer diario para resolver problemas y tomar decisiones
No lo hago porque no s hacerlo, pero debera tener adquirida esta competencia
12. Realizo experiencias de innovacin y/o investigacin en mi prctica profesional.
No lo hago porque no s hacerlo, pero debera tener adquirida esta competencia
Otras:
Observaciones:
1569
ESCALA
1 2 3 4 5
1 2 3 4 5
1 2 3 4 5
1 2 3 4 5
1 2 3 4 5
1 2 3 4 5
1 2 3 4 5
1 2 3 4 5
1 2 3 4 5
1 2 3 4 5
1 2 3 4 5
1 2 3 4 5
1 2 3 4 5
1 2 3 4 5
1 2 3 4 5
1 2 3 4 5
1 2 3 4 5
1
2 3 4 5
1 2 3 4 5
1
1
1
1
1
1
1
2
2
2
2
2
2
2
3
3
3
3
3
3
3
4
4
4
4
4
4
4
5
5
5
5
5
5
5
978-84-695-8363-0
1570
Resumen
El estudio presentado corresponde a la fase dos de una investigacin titulada Las
competencias profesionales de carcter metodolgico en el grado de Pedagoga de la
Universidad de Barcelona (UB)(REDICE12-21000-01 IP: Torrado, M.). Dicha fase centra
su atencin en la identificacin de las actividades que han contribuido en mayor medida a la
adquisicin de las competencias profesionales metodolgicas desde la visin del alumnado
del ltimo curso de carrera. La informacin recogida en la fase anterior de la investigacin
ha constituido el punto de partida para elaborar y aplicar un cuestionario dirigido a todo el
alumnado de cuarto curso para conocer qu actividades programadas son consideradas ms
adecuadas y tiles para adquirir las competencias profesionales metodolgicas. Los
resultados de esta encuesta se muestran en la comunicacin.
Introduccin
Uno de los objetivos centrales del proceso de Bolonia en el Espacio Europeo de
Educacin Superior es el aprendizaje basado en competencias, lo que implica una actitud
proclive al aprendizaje activo por parte del alumnado (Imbernon y Medina, 2005; Prieto,
2008). El diseo curricular, las estrategias de enseanza-aprendizaje, la evaluacin y los
978-84-695-8363-0
1571
Mtodo
La metodologa utilizada ha sido de carcter descriptivo-cuantitativo, tomando como
instrumento de recogida de informacin el cuestionario. La poblacin objeto del estudio la
forman los estudiantes de cuarto curso del grado de Pedagoga de la UB, y est formada por
177 estudiantes. La muestra en el estudio la han compuesto 121 participantes, pertenecientes a
los dos turnos de clases (maana y tarde) y presentes en las clases en el momento de la
aplicacin del instrumento de recogida de datos, considerando un nivel de confianza del
95.5% para poblaciones finitas (p i q= 0.5) lo que supone un margen de error de 0,05. La
muestra se compone principalmente de mujeres, que poseen una mediana de edad de 22 aos,
con un 75,5% que trabaja o trabaj en algn momento durante la carrera. Accedieron a
Pedagoga con una nota media de 6,31 y la escogieron en primera o segunda opcin el 75,5%
(Primera opcin 38%; Segunda opcin 37%). Mayoritariamente se han matriculado en turnos
978-84-695-8363-0
1572
Resultados
Los resultados se presentan en orden a las dimensiones del cuestionario: los aspectos
relacionados con las actividades, con las asignaturas y con la prospectiva profesional.
Tabla 1
Dimensiones e indicadores del cuestionario dirigido al alumnado
Dimensiones
Indicadores
Utilidad de las actividades realizadas en las
asignaturas metodolgicas
Actividades
Asignaturas
Prospectiva
profesional
Caracterizacin
muestra
Preguntas
Actividades/ asignaturas:
Teora y prctica
Instrumentos
Estadstica
Resolucin de problemas
Informtica
Actividades/ asignaturas:
Teora y prctica
Instrumentos
Estadstica
Resolucin de problemas
Informtica
Asignaturas / competencias:
Aplicar elementos bsicos para hacer una
investigacin
Aplicar herramientas para la recogida e
interpretacin de la informacin
Llevar a cabo una investigacin
Cuales No los han asimilado
suficientemente
Cuales se han reiterado innecesariamente
Escala de la
pregunta
Escalar (1
Escalar (1
Escalar (1
Escalar (1
Escalar (1
a 7)
a 7)
a 7)
a 7)
a 7)
Escalar (1
Escalar (1
Escalar (1
Escalar (1
Escalar (1
a 7)
a 7)
a 7)
a 7)
a 7)
Abierta
Escalar (1
Escalar (1
Escalar (1
Escalar (1
Escalar (1
Abierta
Abierta
a 7)
a 7)
a 7)
a 7)
a 7)
Escalar (1 a 7)
Escalar (1 a 7)
Escalar (1 a 7)
Escalar (1 a 7)
Datos personales
Edad
Trabajar
Opcin en la que se escoge la carrera
Nota de acceso a la universidad
Turno de clases escogido principalmente
Asignaturas suspendidas hasta el momento
Razn
Nominal
Ordinal
Razn
Nominal
Razn
978-84-695-8363-0
1573
Actividades
Agrado y utilidad de las actividades metodolgicas
Para este objetivo el cuestionario mostraba un listado de actividades que haban estado
programadas en cada asignatura metodolgica cursada por el alumnado participante, y ste
deba marcar el grado en que le haba gustado la actividad y el grado de utilidad que perciba
para el desarrollo de competencias metodolgicas. Los resultados en conjunto muestran una
satisfaccin y una utilidad moderadas percibidas por el alumnado (con una media de 4,8 y 4,9
en una escala de 1 a 7 respectivamente para el total de las actividades). Si observamos las
Tablas 2 y 3 podemos ver la media para cada actividad y la media total para el conjunto de
actividades detallado tambin por asignatura .
Teora y Prctica de la Investigacin Educativa
Es la asignatura que recibe una media inferior en el conjunto de los tems, siendo la
actividad que gust menos el ejercicio colaborativo del campus virtual (Media = 3,88) y la
que ms gust el diseo de una investigacin educativa en grupos (Media = 4,99). En cuanto
a la utilidad, se observan resultados muy similares, la actividad considerada menos til fue la
colaborativa en el campus virtual (Media=3,89), y la ms til el diseo de una investigacin
educativa (Media=5,22). Otras actividades consideradas tambin tiles fueron la explicacin
de los temas por parte del profesorado y la realizacin de ejercicios en pequeo grupo.
Estadstica Aplicada a la Educacin
Los tems se sitan en una media de entre 3,07 y 5,63, siendo las dos actividades que
gustaron en menor medida la lectura y comentario de artculos (Media = 3,1) y las
conferencias de expertos (Media = 3,07), mientras que las mejor valoradas fueron los
ejercicios de preparacin para el examen y la investigacin simulada (con medias de 5,63 y
5,44 respectivamente). En cuanto a la utilidad los resultados son muy similares.
Instrumentos y Estrategias de Recogida de Informacin
Las dos actividades que menos gustaron al alumnado fueron la lectura y comentario de
artculos y las conferencias de expertos (con medias de 3,96 y 3,77 respectivamente),
mientras que las que ms gustaron fueron aquellas actividades relacionadas con el trabajo en
grupos y los ejercicios de preparacin para el examen (con medias de 5,83 y 5,46
respectivamente). Las actividades consideradas ms tiles son igualmente el trabajo en grupo
y los ejercicios para preparar el examen.
Tabla 2
Agrado y utilidad percibida por el alumnado respecto a las actividades propuestas en las asignaturas
metodolgicas obligatorias
Teora y Prctica de la Investigacin Educativa
(1r Curso 2 Semestre)
Explicacin del tema por parte del profesorado
Proyeccin y comentario de audiovisuales
Ejercicios en pequeos grupos
Lectura comparativa de artculos divulgativos y artculos de
investigacin
Bsqueda bibliogrfica pautada sobre investigaciones de temas
Media; (des.
Tpica) Agrado
4,81; (1,396)
4,28; (1,381)
4,92; (1,369)
4,09; (1,412)
4,31; (1,400)
4,26; (1,403)
4,53; (1,429)
978-84-695-8363-0
escogidos
Presentacin de buenas prcticas en investigaciones (artculos,
informes, investigaciones, etc.)
Pilotaje de instrumentos de medida
Ejercicio colaborativo en el Campus Virtual
Diseo de una investigacin educativa en grupos pequeos
TOTAL DE LA ASIGNATURA
Estadstica Aplicada a la Educacin
(2 Curso 1r Se mestre)
Explicacin del tema por parte del profesorado
Activacin de conocimientos previos
Esquema - resumen de cada bloque temtico
Ejercicios en pequeos grupos de reflexin sobre cada bloque
temtico
Lectura y comentario de artculos
Prcticas en pequeos grupos sobre el clculo de ejercicios
Prcticas en pequeos grupos sobre datos de una investigacin
simulada con SPSS
Actividad donde se ponen en prctica todos los contenido del tema
en una investigacin simulada
Conferencias con expertos
Preparacin para el examen, mediante simulacin de un examen
TOTAL DE LA ASIGNATURA
Instrume ntos y Estrategias de Recogida de Informacin
(2 Curso 2 Semestre)
Explicacin del tema por parte del profesorado
Ejercicios prcticos en clase
Lectura y comentario de artculos
Aplicacin y anlisis del test D-70
Conferencias de expertos
Conferencias de exalumnos de la asignatura
Tutoras presenciales en el aula
Trabajo prctico en grupo (cuestionario y test sociomtrico)
Ejercicios prcticos de preparacin para el examen
TOTAL DE LA ASIGNATURA
1574
4,59; (1,423)
4,29; (1,622)
3,88; (1,718)
4,99; (1,809)
4,51; (1,036)
Media; (des.
Tpica) Agrado
5,23; (1,699)
4,33; (1,652)
4,99; (1,447)
4,79; (1,443)
4,46; (1,540)
3,89; (1,680)
5,22; (1,569)
4,56; (1,027)
Media; (des. Tpica)
Utilidad
5,08; (1,673)
4,44; (1,642)
5,18; (1,424)
4,55; (1,829)
3,10; (1,690)
5,31; (1,505)
4,72; (1,905)
3,41; (1,831)
5,43; (1,551)
5,44; (1,561)
5,50; (1,583)
5,22; (1,480)
3,07; (1,736)
5,63; (1,534)
4,67; (1,076)
Media; (des.
Tpica) Agrado
4,73; (1,582)
5,09; (1,384)
3,96; (1,575)
4,34; (1,804)
3,77; (1,675)
4,03; (1,980)
4,53; (1,663)
5,86; (1,169)
5,43; (1,309)
4,61; (1,164)
5,37; (1,448)
3,24; (1,827)
5,78; (1,421)
4,82; (1,120)
Media; (des. Tpica)
Utilidad
5,03; (1,432)
5,23; (1,310)
3,91; (1,606)
4,46; (1,796)
3,89; (1,650)
4,18; (1,837)
4,57; (1,700)
5,97; (1,250)
5,47; (1,447)
4,72; (1,059)
978-84-695-8363-0
1575
Tabla 3
Agrado y utilidad percibida por el alumnado respecto a las actividades propuestas en las asignaturas
metodolgicas optativas
Resolucin de Problemas a travs de la Investigacin Educativa
Explicacin del tema por parte del profesorado
Discusin i exposicin en pequeos grupos
Lectura y comentario de artculos
Ejercicio prctico en la biblioteca
Identificacin de tendencias de investigacin de manera colaborativa
Diario reflexivo
TOTAL DE LA ASIGNATURA
Informtica Aplicada a la Investigacin Educativa
Explicacin del tema por parte del profesorado
Lectura de buenos informes
Bsqueda bibliogrfica y documental
Creacin o adaptacin de un instrumento de medida (escala de actitud)
Aplicacin del instrumento de medida en una muestra de mnimo 30 sujetos
Creacin de la matriz de datos en SPSS
Aplicacin de pruebas estadsticas sobre la matriz de datos en SPSS
Redaccin de informes parciales de una investigacin simulada
Sesin grupal de presentacin de resultados
Lectura de buenos informes
TOTAL DE LA ASIGNATURA
5,61; (1,406)
5,65; (1,191)
5,04; (1,846)
5,61; (1,438)
5,70; (1,222)
4,82; (2,260)
5,44; (1,185)
Media; (des. Tpica) Agrado
5,48; (1,648)
5,57; (1,376)
5,00; (1,883)
5,52; (1,755)
5,55; (1,438)
4,73; (2,251)
5,38; (1,302)
Media; (des. Tpica) Utilidad
4,95; (1,311)
3,63; (1,422)
4,11; (1,286)
5,32; (1,455)
5,32; (0,946)
5,21; (0,976)
5,26; (0,872)
4,95; (1,026)
5,00; (1,202)
3,63; (1,300)
4,73; (0,724)
5,26; (1,368)
4,21; (1,619)
4,32; (1,416)
5,53; (1,349)
5,63; (0,955)
5,63; (0,955)
5,58; (0,902)
5,16; (0,958)
5,28; (1,406)
4,42; (1,427)
5,02; (0,731)
Asignaturas
Utilidad de cada asignatura para el desarrollo de las competencias metodolgicas
del ttulo
Segn los estudiantes todas la asignaturas han servido de forma similar y en grado
moderadamente alto para el desarrollo competencial metodolgico (la mayora de los tems se
encuentran alrededor del 5 en una escala de 7), siendo las que ms contribuyen a todas las
competencias Teora y prctica (Media=5,13), Instrumentos de obtencin de informacin
(Media=5,18) e Informtica aplicada a la investigacin (Media=5,40). Las asignaturas que
menos contribuiran seran Estadstica aplicada a la Educacin con una media de 4,91 y
Resolucin a problemas a travs de la Investigacin Educativa con una media de 4,80, las
dos asignaturas ms especficas y focalizadas dentro de las asignaturas metodolgicas.
Contenidos poco asimilados
Esta dimensin se analiza a partir de las respuestas a una pregunta abierta. Los
estudiantes indican que necesitaran profundizar o mejorar su formacin en contenidos
978-84-695-8363-0
1576
fundamentales como son el anlisis de datos y el diseo de una investigacin. Algunas de las
respuestas ofrecidas por los estudiantes representativas de esta idea son las siguientes: saber
analizar datos estadsticos con rigor, dominar el anlisis con el SPSS, poder hacer anlisis
estadsticos avanzados, hacer una buena investigacin, hacer una investigacin de forma
completa, plantear buenos proyectos de investigacin y hacer una buena bsqueda
bibliogrfica para fundamentar investigaciones.
De sus respuestas podemos deducir que la formacin ms bsica la han asimilado,
pero no se ven capacitados para completar procesos metodolgicos y con el rigor necesario
profesional.
Tabla 4
Contribucin de cada asignatura a la formacin competencial metodolgica
COMPETENCIAS METODOLGICAS DEL TTULO
ASIGNATURAS
Teora y prctica de la
investigacin educativa
(n=119)
Estadstica aplicada a la
educacin (n=119)
Instrumentos y
estrategias de recogida
de informacin (n=119)
Resolucin de
problemas (n=24)
Informtica aplicada a la
investigacin educativa
(n=19)
Media (desviacin
tpica)
Aplicar las
herramientas
especficas necesarias
para la recogida e
interpretacin de
informacin
5,18 (1,17)
Media (desviacin
tpica)
5,04 (1,30)
4,96 (1,47)
Media (desviacin
tpica)
5,19 (1,26)
Media
total: 5,13
5,05 (1,51)
4,73 (1,52)
5,14 (1,35)
5,24 (1,35)
5,17 (1,35)
Media
total: 4,91
Media
total: 5,18
4,96 (1,85)
4,71 (2,05)
4,75 (1,87)
5,37 (1,46)
5,58 (1,17)
5,26 (1,10)
Media
total: 4,80
Media
total: 5,4
978-84-695-8363-0
1577
enfrentarse al mundo laboral, que debera haber recibido ms formacin o de diferente tipo.
En una escala del 1-7 la valoracin de la satisfaccin con la formacin recibida presenta una
media de 4,95, y con relacin a la suficiencia de la formacin recibida la media baja hasta
3,41.
Tambin consideran que el grado de motivacin hacia la carrera aument o se
mantuvo como estaba a lo largo de los cursos, segn afirma el 70% de los estudiantes. En
cuanto a las intenciones de futuro, el alumnado encuestado no apuesta por la formacin
metodolgica ni por el trabajo en este mbito. Las puntuaciones que reciben estos tems en
una escala de 1 a 7 se sitan en 2,88 y 3,41 de media respectivamente.
Conclusiones
De todos los resultados expuestos podemos considerar una serie de elementos que
podran configurar una cierta aproximacin a la representacin cognitiva que tienen los
alumnos sobre su aprendizaje significativo, considerando la contribucin de las actividades de
aprendizaje realizadas. Aspecto importante ste, ya que nos puede proporcionar algunas pistas
sobre la idoneidad de las actividades para poder lograr un verdadero aprendizaje significativo.
Tambin, es cierto que las modificaciones en aspectos materiales son ms efectivas si stas
vienen acompaadas de cambios o adaptaciones sobre la dimensin cognitiva de los alumnos
(sobre lo que piensan).
Un primer elemento que nos parece importante resaltar es la correspondencia entre
agrado y utilidad de una actividad. En cierta medida, podramos decir que el agrado est
mediatizado por la representacin de utilidad que se tenga sobre la actividad a realizar. Esta
idea aparece cuando se observan las puntuaciones de las asignaturas ms valoradas, que son
las asignaturas de temtica ms holstica y prctica, donde el alumno ve y experimenta todo el
proceso de aprendizaje metodolgico, es decir, planteamiento del problema, diseo,
ejecucin, anlisis y conclusiones. Por el contrario las asignaturas menos valoradas son las
que presentan temticas muy focalizadas sobre aspectos metodolgicos. Otro elemento que
refuerza esta hiptesis es la referida a la necesidad de ampliar contenidos fundamentales,
como la realizacin de una investigacin o el anlisis de datos. En este sentido, y de forma
coherente, los estudiantes consideran que las actividades que ms han contribuido al
desarrollo de las competencias son aquellas que precisamente han reforzado estos contenidos
(ejercicios con SPSS, diseo de instrumentos y realizacin de investigaciones reales).
Un segundo elemento a resaltar es la idea de que la reiteracin es un elemento
necesario para su capacitacin profesional, si bien, se quejan de ella. Seguramente, lo que nos
dicen los alumnos es que, en cierta medida, la reiteracin debera tener parmetros diferentes
o estar planeada de forma distinta a como lo est actualmente. En este sentido, podramos
interpretar que esta reiteracin es necesaria para una mejor asimilacin. En consecuencia,
creemos que se debera explorar ms detenidamente qu es lo que piensan los alumnos sobre
los conocimientos necesarios para tener una buena formacin metodolgica.
Finalmente, los alumnos consideran que no estn suficientemente capacitados para
enfrentarse a procesos metodolgicos que requieran el rigor profesional necesario. Como ya
sabemos, el concepto competencia implica integrar conocimiento, habilidades, actitudes;
realizar ejecuciones; actuar de forma contextual (resolviendo problemas en diversos
contextos); o actuar de forma autnoma (Cano, 2008). Y este conjunto de habilidades no
parece que las hayan integrado los estudiantes plenamente. El planteamiento de las
978-84-695-8363-0
1578
Referencias
Cano, E. (2008). La evaluacin por competencias en la educacin superior. Disponible en
http://www.ugr.es/~recfpro/rev123COL1.pdf
De Miguel, M. (2006). Metodologas de enseanza y aprendizaje para el desarrollo de
competencias. Orientaciones para el profesorado universitario ante el espacio
europeo de educacin superior. Madrid: Alianza Editorial.
Imbernon, F. y Medina, J.L. (2005). Metodologia participativa a laula universitria. La
participaci de lalumnat. Barcelona: Publicacions ICE/UB.
Parcerisa, A. (2010). Ejes para la mejora docente en la universidad. Barcelona:
Octaedro/ICE-UB.
Prieto, L. (Coord.) (2008). La enseanza universitaria centrada en el aprendizaje. Barcelona:
Octaedro/ICE UB.
Salaburu, P.Haug, G. y Mora, J.G. (2011). Espaa y el proceso de Bolonia. Madrid:
Academia Europea de Ciencias y Artes.
Salas Zapata, W. (2005). Formacin por competencias en educacin superior. Disponible en
http://www.rieoei.org/1036salas.htm.
Villardn, L. (2006). Evaluacin del aprendizaje para promover el desarrollo de las
competencias. Educacin XXI, 24, 57-76.
978-84-695-8363-0
1579
Resumen
En esta comunicacin se presentan los resultados obtenidos en la primera fase de la
investigacin que el grupo TRALS est realizando sobre la persistencia y abandono de los
estudiantes en dos titulaciones del mbito de las Ciencias Sociales de la Universidad de
Barcelona, concretamente el grado de Pedagoga y el grado de Administracin y Direccin
de Empresas. Este trabajo pretende analizar el proceso de transicin acadmica tras el
primer ao de carrera en relacin a la situacin de persistencia en la universidad mediante
una metodologa de investigacin sistmica. Los resultados obtenidos, en esta fase, confirman
la existencia de una relacin significativa entre las variables sociocognitivas, la integracin
acadmica y social en la universidad y el papel diferencial del contexto en el acercamiento y
explicacin del fenmeno del abandono.
Descriptores: Persistencia
institucionales.
acadmica,
Abandono,
Factores
personales,
Factores
Abstract
In this communication, we are presenting the results in the first phase of the research that the
TRALS group is working on over Persistence and Drop Out of the students in the area of
Social Sciences, in particular in the studies of Education and Business Administration, in the
University of Barcelona. This work analyzes the transition process after the first academic
year of study in relation to the situation of persistence in college through a systemic research
methodology. The obtained results, in this phase, confirm the existence of a significant
relationship between the social-cognitive variables, academic and social integration in
college and the differential role of context in the approach and explanation of the
phenomenon of dropout.
Introduccin
En el marco de los resultados del proyecto recientemente finalizado y titulado La
persistencia y el abandono en el primer ao de Universidad en Ciencias Sociales se han
planteado una serie de interrogantes en cuanto al valor predictivo de los factores analizados y
ms especficamente, su contribucin en la persistencia universitaria en aos posteriores y en
978-84-695-8363-0
1580
el logro acadmico. En este sentido, diversas investigaciones realizadas por los integrantes del
equipo TRALS (Figuera y Torrado, 2013, Torrado, 2012; Gonzlez, Figuera, Torrado, 2011;
Gairn, Figuera, Triad, 2011; Figuera, Torrado, Pol, Corti, 2011) coinciden en destacar la
importancia del estudio de la transicin en la universidad ms all del primer ao y desde su
marco organizativo de referencia.
As pues, el actual proyecto titulado Trayectorias de abandono, persistencia y
graduacin en ciencias sociales: validacin de un modelo predictivo (EDU2012-31568, IP:
Figuera, P.) ampla el foco de estudio de la transicin. La finalidad es el seguimiento de las
trayectorias acadmicas de los estudiantes de la promocin 2010 de las titulaciones de ADE y
Pedagoga de la UB a lo largo del tiempo terico de duracin de los estudios de grado (cuatro
aos). La investigacin parte de la hiptesis que el valor predictivo de los factores personales
e institucionales en la persistencia del primer ao slo puede verse alterado en el tiempo por
la modificacin de dichos factores, que influirn en el desarrollo de trayectorias acadmicas
posteriores. En este sentido, el estudio profundiza en el acercamiento de las dinmicas que
explican e interfieren en la persistencia y graduacin con la finalidad de validar el modelo
predictivo definido en el estudio previo de transicin a la universidad.
Teniendo en cuenta los objetivos del proyecto y la complejidad del fenmeno objeto
de estudio, se utiliza la metodologa multiestratgica y multimtodo como la ms apropiada
para el tratamiento global de la realidad de las trayectorias acadmicas. El enfoque sistmico
de carcter longitudinal es un intento de establecer puntos de coincidencia entre las
perspectiva micro (muestras participantes) y macro (toda la cohorte) contextualizadas en
ambas titulaciones en el seguimiento de la cohorte de estudio. Desde esta perspectiva, se
pretende contemplar y tratar el hecho analizado en su totalidad, elaborando y aplicando
estrategias de investigacin que combinen elementos cuantitativos y cualitativos.
En la presente comunicacin centramos nuestra atencin en la primera fase del
proyecto como nexo comn entre los resultados obtenidos en el proyecto I+D anterior y la
presente investigacin. Parte de la confirmacin de diferencias y similitudes entre los
estudiantes de ambas titulaciones en cuanto a los factores que explican la transicin
acadmica en el segundo ao del grado universitario.
Antecedentes tericos
El debate conceptual y operativo en torno al estudio de las trayectorias universitarias
en los ltimos aos ha llevado a establecer un marco de comparacin y anlisis de la medicin
de los conceptos vinculados a la permanencia, la retencin y la graduacin, indicadores, todos
ellos, clave de la eficiencia de los sistemas universitarios (Mortenson, 2012). En el marco
internacional, existe un corpus de conocimiento amplio, desarrollado al amparo del inters de
las universidades por optimizar los niveles de excelencia, que ha puesto de manifiesto algunos
principios clave. En primer lugar, se confirma el hecho de la complejidad conceptual y
operativa de los procesos de persistencia, abandono y graduacin y la existencia de
situaciones o tipologas producto de diferentes realidades. Se ha establecido una
categorizacin de estos conceptos a partir de variables temporales (abandono precoz, de
primer ao, desercin tarda, tiempo de graduacin), de continuidad en relacin a la
institucin y a la formacin.
En segundo lugar, la investigacin desarrollada confirma que las trayectorias de
transicin, el riesgo de abandono y la persistencia tienen resultados diferentes entre
978-84-695-8363-0
1581
Mtodo
En esta fase de la investigacin se ha utilizado una metodologa descriptiva y
correlacional. El objetivo es identificar las caractersticas que definen las diferentes
trayectorias acadmicas tanto de persistencia como de abandono tras el primer ao de carrera
en el mbito de las ciencias sociales. Para ello, partimos de los datos recogidos en el I+D
anterior de la cohorte de estudio 2010-11 en las titulaciones de ADE y de Pedagoga en el
primer ao a travs de: a) cuestionarios elaborados ad hoc y validados (Cuestionario sobre la
integracin a la universidad CIU-, Cuestionario de valoracin del 1er semestre CVPS- y 2
semestre -CVSS), b) rendimiento acadmico en el primer ao, c) cuatro grupos de discusin
con alumnado de ambas titulaciones, d) entrevista semi-estructurada a los estudiantes que
978-84-695-8363-0
1582
Resultados
El anlisis institucional de los dos contextos de ciencias sociales estudiados confirma
diferencias, en cuanto a la organizacin y desarrollo del proceso de enseanza-aprendizaje, la
concepcin de la enseanza del profesorado en relacin con el estudiante y la importancia del
clima-clase, evaluacin etc.; as como la existencia de diferencias significativas en las
caractersticas iniciales de los estudiantes de ADE vs Pedagoga en funcin del sexo (la
carrera de Pedagoga ms feminizada), del contexto familiar (el nivel de estudios y
ocupacional de los progenitores es inferior en Pedagoga), en el background acadmico previo
978-84-695-8363-0
1583
ADE
(n=693)
Pedagoga
(n= 134)
978-84-695-8363-0
1584
Tabla 1
Distribucin de la cohorte por tipologa de abandono
Discusin
El seguimiento de los estudiantes en la transicin a la universidad ha permitido
profundizar en la identificacin y caractersticas de trayectorias de persistencia en el primer
ao. Los resultados confirman la interaccin de factores personales e institucionales
facilitadores e inhibidores de la persistencia en el primer ao y muestran que estos fenmenos
son complejos y dinmicos en el tiempo. Los resultados son coherentes con otras
investigaciones sobre la adaptacin inicial como la de Krause y Coates (2008) o la realizada
por Yorke y Longden (2008). Ms all de la incidencia sobre las decisiones de abandono o
continuidad dentro del sistema, podemos afirmar que el primer ao de carrera ha influido
significativamente en la consolidacin de expectativas acadmicas y aspiraciones a ms largo
978-84-695-8363-0
1585
Referencias
lvarez Gonzlez, M., Figuera, P. y Torrado, M. (2011). La problemtica de la transicin
bachillerato-universidad en la Universidad de Barcelona. Revista Espaola de
Orientacin y Psicopedagoga, 22(1). 15-27.
lvarez Prez, P. (2012, octubre). Transicin y acceso a los estudios universitarios: anlisis
de los factores que inciden en la adaptacin y rendimiento acadmico del alumnado.
Simposium presentado en el I Congreso Internacional e Interuniversitario de
Orientacin Educativa y Profesional: rol y retos de la orientacin en la universidad y
en la sociedad del siglo XXI. Mlaga, Universidad de Mlaga.
Bowen, W.; Chingos, M. y McPherson, M. (2009). Crossing the finish line: completing
college at Americas public universities. Princenton. Princenton University Press.
Cabrera, L., Bethencourt, J.T., Gonzlez, M. y lvarez, P. (2006). Un estudio transversal
retrospectivo sobre prolongacin y abandono de estudios universitarios. Revista
Electrnica de Investigacin y Evaluacin Educativa (RELIEVE), 12(1).
Cabrera, A.F., Burkum, K.R., LaNasa, S.M. y Bibo, E.W. (2012). Pathways to a four-year
degree: determinants of transfer and degree completion among socioeconomically
disadvantaged students. En A. Seidman (Ed.), College student retention (pp. 155-209).
Westport, CT: Praeger Publishers.
Figuera, P., Forner, A. y Dorio, I. (2003). Las competencias acadmicas previas y el apoyo
familiar en la transicin a la universidad. Revista de Investigacin Educativa, 21(2),
349-369.
Figuera, P., Torrado, M., Pol, C. y Corti, F. (2011). Anlisis del perfil del estudiante y del
proceso de integracin acadmica en la universidad. Implicaciones para la relacin
pedaggica. Disponible en: http://hdl.handle.net/2445/20946.
Figuera, P. y Torrado, M. (2013). El contexto acadmico como factor diferenciador en la
transicin a la universidad. Revista Contrapontos, 13(1), 33-41.
Gairn, J., Figuera, P. y Triad, X. (2010). Labandonament dels estudiants a les universitats
catalanes. Agncia de Qualitat Universitria: Barcelona.
978-84-695-8363-0
1586
978-84-695-8363-0
1587
Resumen
La Justicia Social tiene su correlato en educacin en tres conceptos interrelacionados que se
erigen como medios y fines en una educacin desde y para la Justicia Social: expectativas,
autoconcepto y desempeo acadmicos. La compleja interaccin de esas tres variables hace
que aun quede mucho por saber sobre su relacin. Esta investigacin busca determinar la
relacin entre Expectativas, Autoconcepto y Rendimiento acadmico en Lengua y
Matemticas en estudiantes de Educacin Primaria de Iberoamrica.Para ello se aplic
pruebas de autoconcepto, de desempeo en Matemticas y en Lengua; y cuestionarios a
estudiantes, padres y docentes, a 5.603 alumnos de 248 aulas y 98 escuelas de nueve pases.
Los resultados muestran que los estudiantes de familias con nivel socio-econmico y cultural
bajo, los inmigrantes y aquellos con lengua materna indgena, obtienen peores desempeos,
hay menores expectativas hacia ellos y su autoconcepto es peor. Tambin se confirma la
estrecha relacin entre los tres factores.
978-84-695-8363-0
1588
Introduccin
La Justicia Social, entendida como redistribucin y como reconocimiento (Fraser,
2008; Fraser y Honneth, 2003; Murillo y Hernndez-Castilla, 2011a), tiene su correlato en
educacin en tres conceptos interrelacionados que se erigen como medios y fines en una
educacin desde y para la Justicia Social: expectativas, autoconcepto y desempeo
acadmicos. De hecho slo en la medida que prestemos atencin al desarrollo de estos tres
factores podremos garantizar una educacin de calidad que contribuya a una sociedad ms
justa.
Definimos el autoconcepto, por una parte, como el conjunto de percepciones o
referencias que el sujeto tiene de s mismo, entendidas como atributos, cualidades y
deficiencias, valores y relaciones que el sujeto conoce como descriptivas de s mismo y que
percibe como datos de su identidad. Estas autopercepciones se ven influidas por las
valoraciones que hacen las personas significativas debido a los refuerzos y las atribuciones
que hacen de su comportamiento; pero tambin a los resultados de sus comportamientos. De
esta forma, el autoconcepto acadmico se construye a partir de las expectativas de docentes y
padres, as como del desempeo acadmico del estudiante. De igual forma, se constituye
como una de las variables de mayor influencia en el rendimiento (Amezca y Fernndez,
2000; Guay, Marsh y Boivin, 2003).
De lo que no parece haber datos concluyentes es en la direccionalidad del vnculo que
une a estas variables. Esencialmente hay cuatro patrones de causalidad: el primero, que indica
que el rendimiento acadmico determina el autoconcepto; un segundo patrn que seala que
los niveles de autoconcepto determinan el grado del logro acadmico; un tercero, en el que el
autoconcepto y el rendimiento acadmico se influyen y se determinan mutuamente; y un
ltimo modelo que propone que terceras variables como, por ejemplo, las personales,
ambientales y acadmicas, pueden ser las verdaderas causantes del autoconcepto y el
rendimiento acadmico (Marsh y Martin, 2011).
Un tercer elemento que est vinculando el rendimiento y el autoconcepto son las
expectativas de las personas significativas. La mayora de la literatura coincide en que las
expectativas tanto paternales (Seginer, 1983) como de los docentes suponen una influencia
directa sobre el rendimiento del estudiante (Alonso, 2005; Jacobs y Harvey, 2010; Nash,
2012; Benner y Mistry 2007). Aunque tambin la investigacin ha insistido en la relacin
entre expectativas paternas y nivel socio-econmico y cultural de los padres (Haveman y
Wolfe, 1994; Duncan, Brooks, Yeun y Smith, 1998; Zhan 2006), lo que lleva a la necesidad
de controlar esa variable para analizar el efecto real entre expectativas y rendimiento
acadmico.
En la presente investigacin se busca determinar la relacin entre Autoconcepto,
Expectativas y Desempeo acadmico en Lengua y Matemticas en estudiantes de Sexto de
Educacin Primaria de Iberoamrica.
978-84-695-8363-0
1589
Mtodo
Para conseguir ese objetivo se desarroll un estudio ex post-facto mediante el enfoque
metodolgico de los Modelos Multinivel con cuatro niveles de anlisis -estudiante, aula,
escuela y pas-.
Las variables utilizadas fueron, por una parte, el autoconcepto, el rendimiento (en
Matemticas y en Lengua) y las expectativas acadmicas (de las familias, de los docentes y
del propio estudiante), y, por otros diferentes variables de ajuste: el nivel socio-econmico de
las familias, el nivel cultural, el gnero de los estudiantes, su origen (nativo/inmigrante) su
lengua materna (espaol u otra), y el nivel socio-econmico de la escuela.
Participaron en el estudio 5.603 alumnos de 248 aulas correspondientes a 98 escuelas
de nueve pases de Iberoamrica (Bolivia, Chile, Colombia, Cuba, Ecuador, Espaa, Panam,
Per y Venezuela). Concretamente se eligieron 10 escuelas en cada pas (Per duplic la
muestra), con los siguientes criterios: cuatro escuelas de alto desempeo, tres de bajo
desempeo y las tres restantes de desempeo medio, ajustado en todos los casos por el nivel
sociocultural. Tambin se intent que las escuelas reflejasen la variedad regional de cada pas;
con diferente hbitat de la localidad donde estn ubicadas (para lo que se tomaron escuelas
situadas en una megaciudad -ms de un milln de habitantes-, zona urbana -entre un milln y
25.000 habitantes- y zona rural -menos de 25.000 habitantes-); y tamao de la escuelas
(grandes, medianas y pequeas). En cada escuela se estudi los grupos de tercer grado de
Educacin Primaria/Bsica (8/9 aos de edad modal), seleccionando todas las aulas de ese
grado de las escuelas ya elegidas. Por ltimo, se estudiaron todos los nios y nias que asisten
a esas aulas.
Para recoger los datos se utiliz una batera de ocho instrumentos de medida:
1. Test de Autoconcepto a partir del Self-description Questionnarie (SDQ-I) (Marsh,
1988; Marsh, Craven y Debus, 1991). Esta prueba mide el autoconcepto en general, el
autoconcepto acadmico (lectura, matemticas y escolar) y el no acadmico (relacin
con los padres, con los pares, apariencia fsica y habilidades fsicas) mediante 56
preguntas tipo likert. Este test de autoconcepto tiene una fiabilidad de 0,938.
2. Pruebas de Rendimiento en Matemticas y en Lengua. Se utilizaron las desarrolladas
por el Laboratorio Latinoamericano de Evaluacin de Calidad de la Educacin, de la
UNESCO, para su primer estudio internacional (LLECE, 2001), y posteriormente
validadas. Las pruebas se disearon y corrigieron a partir de la Teora de Respuesta al
tem (en concreto el modelo de un parmetro o modelo de Rasch), por lo que en su
elaboracin y validacin se tuvieron en cuenta las exigencias tcnicas de este tipo de
pruebas. La fiabilidad de estas pruebas es de 0,895 para la de Rendimiento en
Matemticas, y de 0,925 para la prueba de Rendimiento en Lengua.
3. Cuestionario General del Alumno, que indaga sobre sus caractersticas personales, y
sus expectativas personales y acadmicas.
4. Cuestionario para las Familias, que aborda una serie de temas como el nivel socioeconmico y cultural de la familia, las caractersticas de la familia, o expectativas
familiares sobre el nivel de estudios del nio o nias.
978-84-695-8363-0
1590
5. Cuestionario para los Profesores del Aula, que recoge datos sobre sus caractersticas
personales, as como las expectativas acadmicas hacia los estudiantes.
Como se ha sealado, para realizar los anlisis se utilizaron Modelos Multinivel (o
Modelos Jerrquicos Lineales) con cuatro niveles. Se emplearon estos modelos, en primer
lugar por la existencia de estudiantes de diferentes pases, escuelas y aulas; y, en segundo
trmino, por la necesidad de controlar las variables de ajuste.
Resultados
El proceso para determinar la relacin entre Autoconcepto y Rendimiento es mediante
la utilizacin de Modelos Multinivel de 4 niveles. En las Tablas 1, 2 y 3 se presentan los
resultados del proceso de modelamiento para las variables de producto Rendimiento en
Lengua, Rendimiento en Matemticas y Autoconcepto. El Modelo Nulo slo contiene la
variable producto; en el Modelo con las variables de ajuste se han introducido las seis
variables de control: Nivel socio-econmico, y Nivel cultural de las familias; Gnero del
estudiante, Origen (nativo o inmigrante), Lengua materna (espaol u otra) y Nivel Socioeconmico de la escuela. Por ltimo, en los Modelos finales se introducen las variable de
Autoconcepto y de Expectativas (para los rendimientos en acadmicos), y de expectativas
para el Autoconcepto.
Tabla 1
Resultados del proceso de modelamiento multinivel de cuatro niveles para Rendimiento en Lengua
Parte fija
Intercepto
NSE familia
Nivel cultural familia
Gnero (varn/mujer)
Origen
(nativo/inmigrante)
Lengua
materna
(esp/otra)
NSC escuela
V. explicativas
Autoconcepto
Expectativas estudiante
Expectativas docente
Expectativas familia
Parte aleatoria
Entre pases
Entre escuelas
Entre aulas
Entre alumnos
Modelo Nulo
B
EE
Modelo Ajustado
EE
B
Modelo Final
B
276,33
267,56
3,09
3,48
5,40
NS
6,09
,58
,56
,90
269,70
1,70
1,53
4,49
NS
6,30
,32
,54
,86
-5,14
2,43
-5,71
2,24
4,44
1,45
3,65
1,40
1,42
3,70
7,68
NS
,51
0,36
3,39
498,31
286,17
108,12
1046,1
6
7,70
262,23
181,92
99,18
1037,54
291,68
154,93
120.91
934,25
EE
978-84-695-8363-0
1591
Tabla 2
Resultados del proceso de modelamiento multinivel de cuatro niveles para Rendimiento en
Matemticas
Parte fija
Intercepto
NSE familia
Nivel cultural familia
Gnero (varn/mujer)
Origen
(nativo/inmigrante)
Lengua
materna
(esp/otra)
NSC escuela
V. explicativas
Autoconcepto
Expectativas estudiante
Expectativas docente
Expectativas familia
Parte aleatoria
Entre pases
Entre escuelas
Entre aulas
Entre alumnos
Modelo Nulo
B
EE
Modelo Ajustado
EE
B
Modelo Final
B
305,88
306,88
3,43
4,89
-4,62
-8,01
308,45
1,87
2,75
-5,25
NS
9,31
7,32
0,64
0,61
0,99
2,76
NS
4,53
723,85
419,28
249,92
1264,8
2
431,12
311,79
242,28
1234,72
EE
7,46
0,61
0,59
0,95
NS
1,94
3,90
1,84
2,68
2,87
2,88
NS
0,55
0,39
0,39
453,38
294,77
264,62
1122,91
978-84-695-8363-0
1592
Tabla 3
Resultados del proceso de modelamiento multinivel de cuatro niveles para Autoconcepto
Parte fija
Intercepto
NSE familia
Nivel cultural familia
Gnero (varn/mujer)
Origen
(nativo/inmigrante)
Lengua
materna
(esp/otra)
NSC escuela
V. explicativas
Expectativas estudiante
Expectativas docente
Expectativas familia
Parte aleatoria
Entre pases
Entre escuelas
Entre aulas
Entre alumnos
Modelo Nulo
B
EE
Modelo Ajustado
EE
B
Modelo Final
B
253,63
255,67
1,85
2,49
-2,35
-8,29
4,77
0,74
0,71
1,15
3,16
256,17
NS
NS
-3,17
-5,51
4,83
-7,87
2,95
-8,02
2,88
5,27
NS
176,47
131,93
188,25
1684,32
1,14
3,19
NS
2,80
5,44
1,41
221,16
172,46
192,37
1693,7
8
EE
0,47
0,51
0,55
192,85
181,36
173,16
1636,27
978-84-695-8363-0
0,16
0,24 0,25
Autoconcepto
0,14
0,24
Expectativas de la familia
1593
0,22 0,25
0,21 0,24
Rendimiento cognitivo
0,11
0,16 0,17
Figura 1. Relaciones entre las variables de expectativas hacia el alumno, rendimiento y autoconcepto
Efectivamente, los alumnos que sienten que sus padres y profesores poseen altas
expectativas sobre ellos son los que logran mayores puntuaciones en su autoconcepto. Y,
curiosamente, los datos indican que influye ms la opinin de sus profesores que la de sus
padres. Quiz sea debido a que la opinin de los padres puede verse menos objetiva y, por
tanto, ms alejada de la realidad, mientras que el profesor es un referente y evaluador de los
resultados de una gran variedad de compaeros/as por lo que sus opiniones pueden parecer
ms cualificadas.
Este hecho aporta alguna luz para ilustrar el poder explicativo de las expectativas
sobre el rendimiento, aspecto que se discuta anteriormente: las altas expectativas estn
asociadas al desarrollo de un alto autoconcepto, que a su vez est relacionado con los buenos
resultados acadmicos. En la Figura 1 se han representado estas relaciones.
Las expectativas del profesor influyen en el autoconcepto y ste en el rendimiento
cognitivo. Adems las expectativas del propio alumno inciden a su vez en su rendimiento y en
la percepcin que tiene de s mismo. La familia proyecta expectativas sobre sus hijos e hijas,
como vemos, y ello juega un papel importante en la relacin de estas dos variables,
autoconcepto y rendimiento cognitivo. El grfico nos muestra estas influencias mltiples entre
estas variables: expectativas, autoconcepto y rendimiento cognitivo. Por lo que, lejos de ser
variables independientes entre s, se muestra una interdependencia entre ellas: se
retroalimentan e influyen mutuamente.
Conclusiones
En esta investigacin hemos demostrado, una vez ms, la estrecha relacin entre
Desempeo Acadmico y Autoconcepto, aunque en esta ocasin con datos de estudiantes de
Iberoamrica. Se insiste en la importancia de cuidar el autoconcepto para conseguir que los
estudiantes aprendan.
El hecho de que las nias, los estudiantes de familias con nivel socio-econmico y
cultural ms bajo, los inmigrantes y aquellos cuya lengua materna no es el espaol (en
muchos casos lengua indgena) tengan peores resultados acadmicos (las nias slo en
Matemticas), peor Autoconcepto y expectativas acadmicas ms bajas, confirma que hay
978-84-695-8363-0
1594
Referencias
Alonso, J. (2005). Motivaciones, expectativas y valores-intereses relacionados con el
aprendizaje: el cuestionario MEVA. Psicothema, 17 (3), 404- 411.
Amezca, J. A. y Fernndez, E. (2000). La Influencia del auconcepto en el rendimiento
acadmico. Iberpsicologa, 5, 1-6.
Benner, A. D. y Mistry, R. S. (2007). Congruence of mother and teacher educational
expectations and low-income youth's academic competence. Journal of Educational
Psychology, 99(1), 140-153.
Duncan, G., Brooks, J., Yeung, W. y Smith, J. (1998). How much does childhood poverty
affect the life chances of children. American Sociological Review, 63, 406 423
Fraser, N. (2008). Scales of Justice: Reimagining Political Space in a Globalizing World.
Nueva York: Columbia University Press
Fraser, N. y Honneth, A. (2003). Redistribution or recognition? A political-philosophical
exchange. Londres: Verso Press.
Guay, F., Marsg, H .W. y Boivin, M. (2003). Academic Self-Concept and Academic
Achievement: Developmental Perspectives on Their Causal Ordering. Journal of
Educational Psychology, 95(1), 124-136.
Haverman, R. y Wolfe, B. (1994). Succeeding generations: On the effects of investment in
children. Nueva York: Russell Sage Foundation.
Jacobs, N. y Harvey, D. (2010). The extent to which teacher attitudes and expectations predict
academic achievement of final year students. Educational Studies, 36(2), 195-206.
Marsh, H. W. (1988). Self Description-Questionnaire I. SDQ-I manual and research
monograph. San Antonio, TX: The Psychological Corporation.
978-84-695-8363-0
1595
978-84-695-8363-0
1596
Resumen
Mostrar que una nueva propuesta de enseanza produce mejores actitudes y aprendizajes en
los alumnos requiere disponer de un anlisis de lo que se hace y se consigue con la
enseanza habitual. Para realizar dicho anlisis se ha efectuado un estudio histrico y
epistemolgico de la evolucin de las ideas en gentica clsica, identificando los problemas
que estn en su origen, las ideas que permitieron avanzar y los obstculos que hubo que
superar. Como resultado de dicho estudio se han seleccionado un conjunto de indicadores de
aprendizaje que deberan manifestarse en aquellas personas que hubieran comprendido los
aspectos esenciales del modelo de herencia mendeliana, que se imparte en 4 de ESO.
Dichos indicadores se han utilizado para analizar el aprendizaje tras la enseanza
convencional del tema. En este trabajo se presentan los resultados obtenidos que muestran
las deficiencias ms comunes y justifican la necesidad de una propuesta diferente para su
enseanza.
978-84-695-8363-0
1597
Introduccin
La gentica es uno de los campos a los que se ha prestado una mayor atencin en las
ltimas dcadas desde el punto de vista didctico, debido a su importancia en la enseanza de
la biologa. Los conceptos genticos subyacen en grandes temas de biologa y la apropiacin
de este tipo de conceptos permite elaborar nuevos significados o reconstruir los antiguos
(Ayuso 2002). Por otro lado, la enseanza de la gentica presenta tambin gran inters, ya que
permite aplicar estrategias de resolucin de problemas y el desarrollo de ciertas capacidades
intelectuales y de hbitos de trabajo caractersticos de la actividad cientfica. Tambin se ha
demostrado que la realizacin de problemas abiertos de gentica, con una metodologa basada
en la investigacin, ha permitido mejorar las actitudes hacia las ciencias y lo que la ciencia
hace (Ibez, 2005) (Martnez, 2005).
Desde el modelo de enseanza problematizada por investigacin orientada, la
planificacin de la enseanza requiere de un protocolo que ha sido ampliamente contrastado
en multitud de ocasiones (Martnez-Torregrosa, 1993) (Verd, 2004). Para realizar una
planificacin problematizada coherente con todas estas fases se ha efectuado un estudio
histrico y epistemolgico de la evolucin de las ideas en la gentica clsica. ste anlisis
permite tambin identificar unos indicadores de comprensin del tema (ver anexo 1) que
sirven de referencia para los siguientes objetivos:
Ver en qu medida dichos indicadores se alcanzan por los alumnos tras la
enseanza habitual del tema, y si los obstculos previstos estn presentes en ellos antes y
despus de la enseanza.
Identificar las ideas y razonamientos espontneos que pueden dificultar el
itinerario de avance previsto y que deben, por tanto, ser tenidos en cuenta en la planificacin
de la enseanza.
Servir de referencia para comparar los logros producidos mediante la enseanza
problematizada (cuando se ponga en prctica la secuencia de actividades en el aula) respecto a
los de la enseanza habitual.
En este trabajo presentamos los resultados del anlisis de la enseanza convencional
del modelo de herencia de Mendel en la etapa secundaria, cuya apropiacin hemos
considerado como el objetivo bsico a conseguir por la enseanza de la gentica clsica en
este nivel educativo. La hiptesis de partida es que los indicadores de aprendizaje no se
consiguen tras la enseanza habitual del tema, lo cual justificar la necesidad de una
propuesta de enseanza diferente.
Mtodo
Muestra utilizada e instrumentos de anlisis
La muestra para el anlisis la componen 206 alumnos que durante el curso 20122013 cursaban la materia de Biologa y Geologa de 4 de E.S.O. en diez institutos de
enseanza secundaria, repartidos por toda la provincia de Alicante. Los alumnos pertenecen a
10 grupos elegidos de forma incidental, no por muestreo aleatorio.
978-84-695-8363-0
1598
Procedimiento seguido
El cuestionario se reparti a los profesores de Biologa y Geologa que impartan el
nivel de 4 ESO durante el curso 2012-2013 en distintos centros de enseanza secundaria de
la provincia de Alicante. Con cada uno de estos docentes se revis el cuestionario para
comprobar que las instrucciones eran claras y que todos lo aplicaran de una forma similar. La
aplicacin de dicho instrumento fue grupal y se llev a cabo en horario escolar en una sesin
de al menos 50minutos de la materia de Biologa y Geologa de 4 ESO, previa explicacin de
las instrucciones a los alumnos.
El procedimiento para la valoracin de las respuestas de los alumnos se elabor de
forma conjunta entre dos expertos en la materia con aos de experiencia en docencia de la
gentica mendeliana. La fiabilidad de la valoracin se estableci mediante el anlisis, por
cada uno de los investigadores y la discusin conjunta de los descriptores, de 10 cuestionarios
ya completados para el estudio y seleccionados al azar. Una vez establecidos los criterios de
valoracin de las respuestas los expertos valoraron las respuestas de otros 20 cuestionarios
elegidos al azar. Estos criterios quedaron validados tras encontrar ms del 90% de
coincidencia en las valoraciones de los expertos por separado. Una vez establecidos los
criterios de valoracin de las respuestas al cuestionario se procedi a la valoracin de todas
las respuestas y al anlisis de los resultados.
Resultados
Anlisis descriptivo de las preguntas del cuestionario
En la Tabla 1 se reflejan los resultados de los estadsticos descriptivos obtenidos
para cada pregunta del cuestionario, en cuanto a media, desviacin tpica y frecuencias de
resultados.
978-84-695-8363-0
1599
Tabla 1
Estadsticos descriptivos y frecuencias de las preguntas del cuestionario sobre la enseanza del
Modelo hereditario de Mendel
Indicador de comprensin analizado
Cuestin
Frecuencias de resultados
Descriptivos
0
1
2
0,543
2
206 (100%)
0 (0%)
0 (0%)
0,000
Apropiacin funcional del modelo
3
147 (71,4%)
54 (26,2%)
5 (2,4%)
0,31
0,514
4
106 (51,5%)
93 (45,1%)
7 (3,4%)
0,565
5
97 (47,1%)
98 (47,6%)
11 (5,3%)
0,593
Lmites de validez
6
169 (82,0%)
29 (14,1%)
8 (3,9%)
0,22
M = media
0,500
SD = desviacin tpica
978-84-695-8363-0
1600
Los resultados del anlisis a las cuestiones planteadas son muy deficientes. As por
ejemplo llama la atencin que en todas ellas el porcentaje de alumnos con una comprensin
nula de los indicadores es superior al 45%.
Con respecto a la cuestin nmero 1, relacionada con los problemas que estn en el
origen del modelo de Mendel, la valoracin nula la obtienen el 68,9% de los alumnos, y solo
el 27,7% obtienen una puntuacin media de comprensin, siendo el problema de la prediccin
de enfermedades el indicado con ms frecuencia.
La cuestin con peores resultados es la nmero 2, acerca de las teoras de la
herencia, anteriores o distintas a Mendel, en la que el 100% de los alumnos obtienen una
valoracin de 0. La mayor parte de los alumnos la dejan en blanco, y los que responden
indican otras teoras no relacionadas directamente con la herencia, como puede ser las teoras
evolutivas de Lamarck y Darwin, la teora de la generacin espontnea, el fijismo o el
creacionismo entre otras.
Las cuestiones 3, 4 y 5, cuyo objetivo en conjunto era detectar si los alumnos se han
apropiado funcionalmente del modelo hereditario de Mendel, presentan resultados tambin
deficientes. Incluso las cuestiones 4 y 5, que son muy similares a las prototpicas, la mitad de
los alumnos (51,5% y 47,1% respectivamente) no muestran la ms mnima apropiacin del
modelo. Por otro lado una gran parte de los alumnos (45,1% y 47,6% para cada pregunta)
presentan una apropiacin parcial del modelo con carencias en su comprensin; en la mayora
de estos casos se limitan al uso de simbologa tpica mendeliana en forma algortmica sin una
estrategia clara en la resolucin del problema planteado.
Cuando las preguntas sobre el indicador 2 se presentaron alejndonos del modo
habitual de formularlas, por ejemplo en forma totalmente abierta (ver anexo 2), los resultados
son mucho peores. Esto es lo que ocurre con la pregunta 3 donde ms del 70% de los alumnos
no presentan apropiacin alguna del modelo. Un ejemplo representativo de respuesta a la
cuestin 3 es la dada en el cuestionario 196, cuya respuesta literal es aunque s hacer los
problemas de gentica ms o menos, no s explicar la herencia
El anlisis de la presencia de los lmites de validez del modelo en las respuestas
obtiene resultados igualmente deficientes. As un 82% dejan la cuestin en blanco, creen que
el modelo de Mendel es universal o indican que no lo es pero sin argumentacin alguna. El
14,1% indica que las limitaciones corresponden a casos de codominancia, herencia intermedia
o herencia ligada al sexo, que en realidad son casos tambin relacionados con herencia
mendeliana. Solo el 3,9% restante alude correctamente a la herencia dependiente de genes
ligados.
978-84-695-8363-0
1601
Tabla 2
Estadsticos descriptivos de los indicadores de aprendizaje en la herencia mendeliana
Frecuencias de resultados
Indicador de comprensin
Cuestiones utilizadas
Comprensin media
Comprensin
me dia-alta
96,6%
3,4%
0%
71,4%
26,2%
2,4%
66,1%
28,2%
5,7%
81,5%
13,1%
5,4%
82,0%
14,1%
3,9%
978-84-695-8363-0
1602
Con el indicador 3, conocer las limitaciones del modelo, cuando puede aplicarse y
cuando no, y ver la necesidad de un modelo ms amplio, se obtienen de nuevo valores de
comprensin bajos muy alarmantes: un 82% por debajo de lo que sera una comprensin
media. Estos resultados tan bajos confirman que muy pocos de los alumnos son conscientes
de las limitaciones reales del modelo con tendencia a pensar a que es de aplicacin universal.
Discusin
En funcin de los datos obtenidos se confirma la hiptesis de partida del estudio, la
cual supona que los resultados mostraran deficiencias en la comprensin del tema.
Los resultados apuntan hacia una enseanza descontextualizada sin referencias
claras a los problemas que dieron origen al modelo de herencia de Mendel. Prcticamente no
hay alusin alguna a los problemas surgidos en la seleccin artificial de variedades de plantas
y animales en la sociedad agrcola y ganadera de la poca o a la transmisin de enfermedades
hereditarias.
Ms llamativa an es la ausencia total de antecedentes al modelo en las respuestas
de los alumnos. Mendel no fue el primero en realizar experimentos de cruces con plantas sino
que recogi ya una larga tradicin de experimentos y observaciones sobre hibridacin vegetal,
ofreciendo una visin simplista de la elaboracin del modelo de herencia.
Por otro lado la existencia de modelos alternativos es totalmente desconocida para el
alumnado. De forma coetnea a Mendel surgieron otros modelos para explicar la herencia de
caracteres. De todos ellos destaca el de la herencia de caracteres ancestrales por mezcla, en
vigor, incluso, hasta despus del redescubrimiento de los trabajos de Mendel durante el siglo
XX. Esta carencia se extiende tambin a la prctica totalidad de los libros de texto
consultados e incluso al propio profesorado de secundaria. Este tipo de explicaciones, donde
se elaboran modelos, que despus son sustituidos por otros, son de vital importancia para
entender como funciona la ciencia y cul su forma de generar conocimientos originando
cambios actitudinales positivos
Los resultados muestran tambin una baja apropiacin funcional del modelo de
Mendel. En la mayora de los casos se utilizan conceptos y terminologa mendeliana pero con
escasa comprensin, derivadas normalmente de la resolucin de cuestiones cerradas, no de
verdaderas situaciones problemticas. El resultado es la resolucin de problemas de lpiz y
papel de forma algortmica con escasa comprensin, perdindose la oportunidad de ensear
habilidades y destrezas propiamente cientficas. La mayor dificultad en la resolucin de
cuestiones abiertas pone de manifiesto el escaso tiempo dedicado al desarrollo del
razonamiento lgico en las aulas.
Por ltimo desatacar que en la enseanza parece no hay alusin alguna a las
limitaciones del modelo. El desconocimiento de este aspecto fundamental para la
comprensin global, puede ser consecuencia de lo expuesto anteriormente en relacin a la
escasa apropiacin del modelo. Una asimilacin con comprensin pasa por comprender la
independencia en la herencia de los factores mendelianos para uno o para ms caracteres
fsicos. Una breve reflexin sobre el tema llevara a ver al alumno que esto ocurre con una
baja probabilidad, si consideramos rasgos fsicos al azar. La ausencia de estas consideraciones
puede hacer creer a alumno que el modelo de herencia de Mendel es de aplicacin universal.
978-84-695-8363-0
1603
Dados los bajos resultados para todos los indicadores, se corrobora la necesidad de
una enseanza alternativa a la habitual en la que prevalezca la comprensin y el razonamiento
de los mecanismos implicados en la herencia antes que la resolucin mecnica de problemas
de gentica.
Aun siendo optimistas con los resultados del estudio se debe ser consciente de la
provisionalidad de las conclusiones, debido al tamao de la muestra. No hubo una estimacin
de clculo del tamao de muestra, puesto que el muestreo no fue probabilstico. Por otro lado
su mbito de estudio se limit a centros de tan solo la provincia de Alicante en Espaa.
Los resultados de este estudio ponen de manifiesto las deficiencias en la
comprensin y el aprendizaje por parte de los alumnos que suelen seguir un mtodo de
enseanza convencional, basado en la transmisin de conocimientos ya elaborados en su
estado final. Ello implica la necesidad de desarrollar otros mtodos didcticos que faciliten un
aprendizaje ms significativo. Nuestra propuesta pasa por la aplicacin de un modelo
problematizado de la enseanza, con una estrategia estructurada en entorno a problemas
abiertos y estrategias basadas en la investigacin. Un anlisis emprico posterior a la
intervencin servir para confirmar o rechazar esta nueva hiptesis de mejora.
Referencias
Ayuso, G. E. y Banet, E. (2002) Alternativas a la Enseanza de la Gentica en Educacin
Secundaria. Enseanza de las Ciencias, 20 (1), 133-157.
Banet, E. y Ayuso, G.E. (2003) Teaching of biological inheritance and evolution of living
beings in secondary school. International Journal of Science Education, 25 (3), 373407.
Ibez, T. y Martnez, M. (2005) Solving problems in genetics II. International Journal of
Science Education, 27 (12), 1495-1519.
Martnez-Torregrosa, J. y Verd, R. (1993) Cmo organizar la enseanza para un mejor
aprendizaje? La estructura de los cursos y los temas en la enseanza por
investigacin. Enseanza de las Ciencias (nmero extra), 97-98.
Matnez, T. (2005) Solving problems in genetics. International Journal of Science Education,
27 (1), 101-121.
Verd, R. (2004) La estructura problematizada de los temas y cursos de Fsica y Qumica
como instrumento de mejora de su enseanza y aprendizaje. Tesis Doctoral:
Universitat de Valncia.
978-84-695-8363-0
1604
Anexos
Anexo 1
Indicadores de comprensin para el modelo hereditario de Mendel
1. Conocer los problemas que, en relacin con las dificultades de prediccin de caracteres
heredables, estn en el origen del modelo de Mendel, lo cual supone
1.1. Ser capaces de describir el modo tradicional en que se ha intentado seleccionar y
mantener razas de animales y variedades de plantas y describir su problemtica
asociada
1.2. Conocer las teoras existentes anteriores a Mendel y sus deficiencias en la
prediccin de caracteres heredables, como el modelo de herencia por mezcla de
caracteres paternos
2. Apropiarse funcionalmente del modelo hereditario alternativo de Mendel en la
bsqueda de regularidades, lo cual supone
2.1. Comprender el papel del azar en la herencia independiente de los factores de un
carcter fsico, y para ello que:
- Un rasgo fsico est controlado por la posesin de dos factores
- Estos factores se separan y solo se recibe uno de cada progenitor
La expresin final del carcter depende de la combinacin nueva que se genere tras la
fecundacin y la relacin de dominancia entre ellos
2.2. Comprender el papel del azar en la herencia independiente de los factores de
caracteres distintos, lo que a su vez implica entender que:
- La herencia de los factores de un carcter y su expresin no se ven influenciados por la
herencia y expresin de otros caracteres
2.
Conocer las limitaciones del modelo, cuando puede aplicarse (y cuando no) y ver
la necesidad de un modelo ms amplio.
Anexo 2
Cuestionario para el anlisis de la enseanza del modelo de Mendel en la E.S.O.
Indicador de
comprensin
Cuestin 1. Di problemas de inters (desde la antigedad hasta la actualidad) que 1.1
han podido ser solucionados segn se ha avanzado en el conocimiento sobre la
herencia
1.2
Cuestin 2. En clase has estudiado las ideas de Mendel sobre la herencia. Mendel
vivi en el siglo XIX y sus ideas se aceptaron a principios del siglo XX. Cita
alguna/s ideas o teoras sobre la herencia anteriores o distintas a las de Mendel.
2
Cuestin 3. Imagina que tienes que explicarle a una persona, que no ha estudiado
Biologa, las ideas importantes sobre la herencia (es decir sobre cmo se transmiten
rasgos de los padres a los hijos) que has aprendido. Qu le diras?
Cuestin 4. Un agricultor quiere cultivar dos variedades de flores de una misma 2.1
planta (flores rojas y flores blancas). Quiere dividir la plantacin en dos
invernaderos, uno que produzca solamente plantas con flores rojas y otro que
produzca solamente plantas con flores blancas. Para ello compra en el vivero una
Cuestiones
978-84-695-8363-0
1605
sola planta roja y una sola planta blanca. Suponiendo que el color de la flor de dicha
planta sigue una herencia mendeliana, elige razonadamente el mejor plan para
ayudarle a conseguirlo.
Cuestin 5. Una industria agroalimentaria necesita un suministro continuo de
guisantes amarillos y lisos para su envasado y venta posterior. Para ello establecieron 2.2
una gran plantacin de plantas de guisante, en un invernadero y bajo condiciones
controladas; as cada planta puede originar decenas de semillas. Los guisantes que se
utilizaron en la siembra fueron todos de la variedad deseada amarilla-lisa. Cuando
crecieron las plantas se permiti su autofecundacin (el polen de las flores de cada
planta fecund sus mismos vulos, ya que en ellas los estambres y el pistilo
permanecen muy cerca y estn aislados del exterior por sus propios ptalos que los
envuelven). Al llegar la recoleccin, en contra de lo esperado, se observaron tres
variedades de plantas, segn se describen a continuacin:
3
a. Variedad 1: plantas donde todos los guisantes eran amarillos y lisos.
b. Variedad 2: plantas donde aparecan sobre todo guisantes amarillos y lisos
pero tambin verdes y lisos.
c. Variedad 3: Plantas donde aparecan sobre todo guisantes amarillos y lisos,
pero tambin verdes-lisos y amarillos-rugosos y en menor proporcin verdes
y rugosos.
Te pedimos que utilices lo que has aprendido del modelo de herencia de Mendel para
explicar las causas de que haya ocurrido as.
Cuestin 6. El modelo de herencia de Mendel supuso la primera demostracin de la
existencia de reglas en la herencia de caracteres o rasgos fsicos. Crees que se
cumple siempre? Explica con tus palabras cuando puede aplicarse y cuando no, es
decir si se cumple de forma general o si hay casos en los que no se cumple.
Anexo 3
Ejemplo de valoracin de un indicador de aprendizaje en el anlisis de la enseanza
Indicador 3. Conocer las limitaciones del modelo, cuando puede aplicarse y cuando no, y ver la
necesidad de un modelo ms amplio.
Valoracin
978-84-695-8363-0
1606
978-84-695-8363-0
1607
Resumen
A travs del estudio realizado se trat de conocer el nivel de competencia emocional del
alumnado de un centro de educacin primaria, con el objetivo de disear un programa que
respondiera a las necesidades en educacin emocional del colectivo de alumnos. A partir de la
evaluacin inicial, se dise un programa en funcin de las carencias detectadas.
Posteriormente, se implement el programa por parte del profesorado participante. Las
sesiones fueron impartidas durante una hora semanal en el horario de tutora, con una
duracin total de 20 semanas. Posteriormente se analizaron y evaluaron los efectos del
programa en funcin del nivel inicial de competencia emocional del alumnado, as como el
grado de satisfaccin de los participantes con el mismo. Tras el anlisis de resultados se
observan mejoras en los alumnos que realizan el programa frente a aquellos que no lo
realizan.
Introduccin
Mediante este estudio se intent conocer el nivel de competencia emocional del
alumnado de un centro de educacin primaria, con la finalidad de disear un programa que
respondiera a las necesidades en educacin emocional de los alumnos. Posteriormente se
analizaron y evaluaron los efectos del programa en funcin del nivel inicial de competencia
emocional del alumnado, junto con el grado de satisfaccin de los participantes con el mismo.
978-84-695-8363-0
1608
Mtodo
Enfoque de investigacin y diseo
El enfoque metodolgico utilizado fue de carcter cuantitativo y cualitativo. Se
emplearon diversos tipos de diseo. Para conocer el nivel de competencia emocional del
alumnado se emple un diseo no experimental descriptivo, obteniendo los datos mediante el
empleo de cuestionarios.
En relacin al objetivo de evaluar el impacto del programa se utiliz un diseo cuasiexperimental de dos grupos con pretest, postest y grupo control; puesto que se trat de medir el
nivel de competencia emocional antes y despus de administrar el programa, tratando de
explicar las relaciones causa-efecto.
Para evaluar el grado de satisfaccin de los participantes con el programa se utiliz un
enfoque metodolgico cualitativo a travs de un diseo no experimental descriptivo, mediante
el empleo de cuestionarios con preguntas abiertas.
Contexto y participantes
El centro en el que se imparti este programa est situado en un entorno urbano en un
barrio cntrico de la ciudad de Alicante. El nivel sociocultural de la poblacin escolar es de tipo
medio y medio-alto y el rendimiento acadmico es en lneas generales satisfactorio. El nmero
total de alumnos es de 424. El colegio cuenta con 6 unidades de Educacin Infantil y 12 de
Educacin Primaria y tiene doble lnea (PIP y PIL: Programa de Incorporacin Progresiva y
Programa de Inmersin Lingstica, respectivamente). El nmero total de profesores es de 30,
de los que 13 pertenecan al grupo de trabajo Educacin Afectiva-Social y en Valores para la
Convivencia (E.A.S.V.C).
Los profesores participantes en este estudio fueron seleccionados en funcin de su
voluntariedad. El grupo experimental que aplic el programa se constituy con el profesorado
voluntario del grupo E.A.S.V.C. Un nmero similar de profesores se seleccion al azar de
entre el resto de profesores del centro, garantizando la representacin de cada uno de los ciclos
de la etapa Primaria. Estos formaron el grupo control. El alumnado participante estuvo formado
por los nios matriculados en los cursos que impartan los profesores seleccionados, siendo el
nmero total de 135.
Se trata de un muestreo no probabilstico por disponibilidad, ya que la muestra fue
seleccionada por la accesibilidad a la misma y conveniencia (Cardona 2002).
978-84-695-8363-0
1609
Procedimiento
En una primera fase, el profesorado participante cumpliment la escala relativa a la
competencia emocional del alumnado (Hightower, 1986). Asimismo, se elabor una adaptacin
de la misma para ser cumplimentada tanto por el propio alumno, como por un compaero sobre
ste. A partir de esta evaluacin se obtuvo informacin del nivel de competencia emocional del
alumnado y se dise el programa teniendo en cuenta las carencias detectadas. El profesor-tutor
del grupo fue el responsable de impartir las sesiones del programa dentro del horario
establecido semanalmente para actividades de tutora. La metodologa empleada fue ldica,
activa y participativa. La duracin del mismo fue de aproximadamente 20 semanas.
Una vez finalizada la aplicacin del programa, se realiz el post-test, para comprobar si
se haban producido modificaciones en la competencia emocional del alumnado. En esta
evaluacin se volvi a administrar por parte del profesorado la escala de registro de la
competencia emocional (Hightower, 1986) y la adaptacin de la misma para el alumnado. Del
mismo modo, se evalu el grado de satisfaccin de los participantes a travs una serie de
cuestiones propuestas tanto al profesorado como a los alumnos. Ejemplos de cuestiones
propuestas al profesorado fueron: En qu aspectos crees que los objetivos programados han
contribuido a incrementar la competencia emocional del alumnado? Qu es lo que ms te ha
gustado del programa? Por qu?
Ejemplo de cuestiones propuestas al alumnado: Te llevas mejor con tus compaeros
despus de haber realizado el programa?, Piensas que sabes reconocer y expresar tus
emociones mejor despus de haber realizado estas actividades?.
978-84-695-8363-0
1610
Resultados
En relacin al objetivo de objetivo de evaluar el impacto del programa, el anlisis de los
resultados pone de manifiesto mejoras en la competencia emocional del alumnado producidas
en el grupo que realiza el programa frente al que no lo realiza.
Si atendemos a la persona que realiza la evaluacin, vemos que las diferencias
significativas de mayor relevancia fueron encontradas en la evaluacin realizada por el
profesor. Dentro de esta evaluacin, la mayor parte de las diferencias estadsticamente
significativas fueron halladas en los siguientes factores de la escala: Timidez, Sociabilidad,
Motivacin, Seguimiento de normas, Comportamientos perturbadores.
En relacin al objetivo de evaluar el grado de satisfaccin de los participantes con el
programa, la totalidad de los encuestados encuentran que El programa que hemos desarrollado
contribuye a la formacin de los alumnos como personas. Sin embargo, el item que recibi
menor puntuacin fue Considero que el resto de profesores se han implicado igualmente de
una forma importante.
Por otra parte, todos los profesores participantes sealaron que el programa merece ser
recomendado a otros centros.
Los aspectos del programa que ms han gustado a los profesores se refieren al
desarrollo de las habilidades emocionales trabajadas. Contrariamente, lo que menos les ha
gustado de ste programa, hace referencia a la falta de tiempo para preparar los materiales y
trabajar con algunos de stos.
En cuanto al grado de satisfaccin de los alumnos, la mayora recomendara el
programa a otros compaeros de colegio que no lo han realizado. Ms de la mitad manifiesta
que las relaciones entre compaeros han mejorado despus del programa y un 58% opina que
saben cmo reconocer y expresar sus propias emociones mejor que lo hacan antes de haber
realizado el programa.
Discusin
Los resultados de la presente investigacin, muestran que la aplicacin de un programa
de educacin afectiva-social mejora la competencia emocional del alumnado que lo realiza. No
obstante, a continuacin sealaremos algunas limitaciones que presenta el presente estudio:
Como condicionantes del programa podemos sealar los elevados niveles de competencia
emocional que mostraron la mayor parte de alumnos antes de implementar el programa. Por ello
sera deseable realizar este estudio con muestras representativas de un sector geogrfico ms
amplio. Otros aspectos a tener en cuenta son el factor de deseabilidad social, tanto de
profesores como de alumnos a la hora de responder a los cuestionarios, que pueden condicionar
los resultados.
Como sugerencia presentada por los profesores, sera interesante ampliar la duracin
del programa a todo el curso escolar.
Mediante este estudio se pretendi realizar una evaluacin rigurosa de un programa de
educacin emocional para poder difundir sus resultados a la comunidad educativa.
978-84-695-8363-0
1611
Referencias
Bisquerra, R. (2003). Educacin emocional y competencias bsicas para la vida. Revista de
Investigacin Educativa, 1(21), 7-43.
Cardona, C. (2002). Introduccin a los mtodos de investigacin en educacin. Madrid: E.O.S.
Gallego, D. J. y Gallego Alarcn, M. J. (2004). Educar la inteligencia emocional en el aula.
Madrid: PPC.
Goleman, D. (1995). Inteligencia emocional. Barcelona: Kairs.
Hightower, D. et al. (1986). The Teacher Child Rating Scale: A brief objective measure of
elementary childrens school problem behaviors and competencies. School Pshycology
Review, 15.
978-84-695-8363-0
1612
Resumen
La mayor parte de los futuros maestros de primaria no han cursado la especialidad de
ciencias en el Bachillerato y presenta unas actitudes negativas hacia las ciencias y su
enseanza. En este estudio mostramos como la enseanza problematizada de un tema de
ciencias (astronoma diurna) para alumnos de Grado de Primaria produce una mejora en sus
actitudes hacia la ciencia y su enseanza, lo cual es fundamental para que trasmitan inters
hacia la ciencia a sus futuros alumno. Por otro lado, demostramos que esa actitud final hacia
las ciencias es alta, incluso para aquellos alumnos que no consiguieron alcanzar los
conocimientos mnimos sobre el tema tratado. Aunque se motiv a la mitad de los alumnos
para que hablaran del tema tratado con personas ajenas al aula, encontramos todos los
alumnos hablaron por igual de este tema fuera de clase, lo que indica que este tipo de
enseanza produce una alta implicacin de los alumnos con el tema tratado.
978-84-695-8363-0
1613
Introduccin
Hemos mostrado, en un trabajo anterior, que es posible conseguir que la mayor parte
de los futuros maestros adquieran un nivel elevado de comprensin sobre los ciclos y
simetras del movimiento del Sol y el modelo Sol/Tierra. Y dicho aprendizaje se ha
conseguido con alumnos que (en su mayor parte) no han cursado la especialidad de ciencias
en el Bachillerato y que inicialmente tienen unas actitudes negativas hacia las ciencias y su
enseanza (especialmente hacia la fsica y la qumica). Sabemos que cambiar dichas actitudes
es fundamental si queremos que transmitan a sus alumnos en primaria una disposicin
positiva hacia el aprendizaje de las ciencias (Appleton, 1995).
Sin embargo, podra ocurrir que al tratar de ensearles algunas de las grandes ideas de
la ciencia en profundidad, aumentara su rechazo hacia la enseanza de las ciencias. Tiene
mucho inters, por tanto, estudiar el efecto en las actitudes de los futuros maestros que tiene la
enseanza recibida.
Mtodo
Hiptesis
Nuestra hiptesis, por el contrario, afirma, que la enseanza problematizada (por
investigacin guiada en torno a problemas fundamentales) favorece un aprendizaje con
comprensin de conocimientos cientficos y, simultneamente, genera actitudes positivas
hacia las ciencias y su enseanza. Ya hemos presentado los resultados sobre el aprendizaje de
los futuros maestros en un trabajo anterior, en este mismo Congreso. Respecto a las actitudes,
de un modo operativo, nuestra hiptesis equivale a afirmar que:
H.1 La enseanza problematizada sobre los ciclos y simetras del movimiento del Sol y el
modelo Sol/Tierra, produce unas actitudes muy positivas hacia la enseanza/aprendizaje de
las ciencias
H.2 El cambio actitudinal producido es independiente de la actitud inicial. Dicho de otro
modo: el efecto actitudinal producido supera actitudes iniciales negativas.
H.3 Las actitudes generadas por la enseanza recibida son positivas incluso en aquellos
alumnos que no han conseguido los indicadores de aprendizaje pretendidos. Dicho de otro
modo, estos alumnos no rechazan las ciencias y su enseanza por no haber superado el curso.
Esperamos que sea as, porque:
1.- La enseanza problematizada propicia un ambiente de trabajo donde hay oportunidades
reiteradas y sistemticas para plantear preguntas, dudar, debatir y someter a pruebas las ideas
mediante la bsqueda de evidencias y razonamientos para avanzar en el problema
inicialmente planteado. Este ambiente abierto e investigativo, favorece la implicacin afectiva
de los estudiantes. En el modelo de enseanza por investigacin guiada, la estrategia o plan
para tratar de resolver el problema planteado, se convierte en el ndice del tema: la secuencia
de apartados no es arbitraria (para el alumno) sino que responde a una lgica problematizada.
Esto da lugar a que exista una meta y un hilo conductor, propiciando de modo natural las
recapitulaciones (Cul era nuestro problema? Qu pensamos hacer para avanzar? Cunto
hemos avanzado y qu queda por hacer?). De este modo, los alumnos se van apropiando, cada
978-84-695-8363-0
1614
vez ms, del problema y se sienten partcipes de un plan. Esta estructura debe favorecer la
implicacin/ motivacin de los alumnos.
2.- Adems, la evaluacin (que tiene una fuerte influencia en las actitudes de los alumnos), en
el modelo de enseanza problematizada es un instrumento diseado para impulsar el
aprendizaje y mejorar la enseanza. Puesto que la clase, en este modelo, se considera como un
conjunto de pequeos equipos de investigadores noveles que se enfrentan a problemas de
inters guiados por un investigador experto (profesor), la evaluacin se concibe como un
instrumento para recapitular lo avanzado, tomar conciencia de los avances y de los obstculos
por superar, y asegurarse de la firmeza del avance conseguido (en cada uno de los alumnos)
(Gil Prez y Martnez Torregrosa, 2005). El sistema de evaluacin se disea al mismo tiempo
que se elaboran los temas por el equipo de profesores, que deben identificar la meta
orientadora, los objetivos concretos o pasos importantes que hay que conseguir para alcanzar
la meta orientadora y los posibles obstculos asociados (ideas espontneas, puntos negros,
requisitos, etc.) en cada uno de estos pasos. Se dispone, pues, de un itinerario de
enseanza/aprendizaje hacia la meta orientadora, de un itinerario de obstculos asociados, y
de un itinerario de evaluacin para ayudar al avance firme. La periodicidad de la evaluacin
se hace a distintas escalas temporales, cada una de las cuales se lleva a cabo en un ambiente
diferente (Hickey et al., 2006). La evaluacin a escala inmediata es la que se realiza durante
la puesta en comn de las actividades que realizan los equipos de alumnos. En un ambiente
abierto, informal, los alumnos con el profesor valoran el trabajo realizado y advierten los
posibles errores o dificultades que se han encontrado en la tarea. A escala cercana (una vez
cada dos semanas, al menos), la actividad evaluativa se realiza por escrito, lo que la hace ms
formal, recibe una calificacin, pero sta slo tiene por finalidad que el alumno tome
conciencia de la firmeza de su avance en el plan seguido. Suele durar unos veinte minutos, en
la clase habitual; o puede ser una prueba por internet sobre lo tratado (tras la que se obtiene la
calificacin automticamente); o un cuestionario de autoevaluacin para identificar aqullos
aspectos que an no se dominan. Por ltimo, a escala prxima, la evaluacin se desarrolla en
un ambiente estrictamente formal (examen), por escrito, al final de cada tema (una prueba
cada 18-20 horas de clase, aproximadamente). La valoracin se realiza respecto a criterios
(sabe o no sabe...?) y cada alumno recibe su examen comentado y con una calificacin que
refleja su grado de adquisicin de los objetivos. El profesor ofrece una nota a quienes
consiguen los indicadores de comprensin a escala prxima, y aqullos que no los consiguen
(o quienes no aceptan la nota ofrecida) realizan el examen final (evaluacin a escala distante).
En todo caso, se presta una atencin especial a que exista coherencia en las distintas escalas
temporales de la evaluacin (orientando hacia lo importante, evitando el xito del aprendizaje
repetitivo, resaltando la importancia de la justificacin de lo que se hace, etc.).
3.- Por ltimo, esperamos que se generen actitudes positivas porque la asignatura est
diseada para aprender de verdad, y el aprendizaje slido, justificado, funcional, no puede
ms que generar actitudes positivas. Si hemos conseguido un elevado nivel de aprendizaje
medido mediante la consecucin de indicadores exigentes, como hemos mostrado en la
anterior comunicacin, cabe esperar que las actitudes sean muy positivas.
Resultados
Se seleccionaron 2 grupos de alumnos de 2 curso del Grado de Magisterio en
Educacin Primaria (de un total de 8 grupos posibles), con el criterio de mxima
homogeneidad acadmica. Esto fue posible porque la eleccin de grupo y horario por los
alumnos se realiza segn la nota media del curso anterior, de modo que se eligieron dos
978-84-695-8363-0
1615
grupos con el mismo horario y cuya matriculacin se cerr en la misma fecha. El proceso se
ha realizado durante dos cursos, disponiendo, pues, de cuatro muestras de aproximadamente
60 alumnos cada una, que fueron asignadas aleatoriamente a dos profesores (A, B) con amplia
experiencia en la enseanza de las ciencias por investigacin guiada.
Mediante un cuestionario al inicio de la asignatura (annimo e individual) se obtuvo
informacin sobre la formacin de acceso a la carrera (Ciencias; Letras o Mixtas slo
Matemticas para las CC. Sociales, sin Fsica ni Qumica-), y sobre las actitudes iniciales
hacia las ciencias y su enseanza.
Tabla 1
Denominacin, nmero de alumnos y titulacin de acceso de los grupos
Grupo
Profesor
Ao
Ciencias
frecuencia (%)
Letras
frecuencia(%)
Mixtas
frecuencia (%)
A1
2011-12
53
8 (15%)
9 (17%)
36 (68%)
B1
2011-12
51
12 (23%)
12 (24%)
27 (53%)
A2
2012-13
57
9 (16%)
10 (17%)
38 (67%)
B2
2012-13
54
8 (15%)
11 (20%)
35 (65%)
Profesor
Ao
Negativa
(% alumnos)
Neutra
(% alumnos)
Positiva
(% alumnos)
A1
2011-12
53
45
34
21
B1
2011-12
51
53
20
27
A2
2012-13
57
55
19
26
B2
2012-13
54
57
17
26
978-84-695-8363-0
* No hay diferencias significativas entre grupos, en cuanto a la actitud inicial hacia las ciencias (
1616
= 5.764; p =
0.4502)
El efecto de la enseanza sobre las actitudes finales hacia las ciencias y su aprendizaje,
se ha medido por dos vas. La primera, mediante un cuestionario de 23 tems (17 enunciados
de forma afirmativa, y 6 de forma negativa) que deban ser valorados de 0 a 10, indicando el 0
un desacuerdo total con el enunciado y el 10 un acuerdo total. Las respuestas se obtuvieron en
la ltima semana de clase, despus de haber realizado la ltima prueba a escala prxima, y
antes de conocer la calificacin final. Para medir la fiabilidad de los cuestionarios en los dos
aos en los que se realiz el estudio, se utiliz el ndice alfa de Cronbach, evalundose por
separado los tems enunciados de forma positiva de los tems enunciados de forma negativa,
ya que todos los tems deben estar medidos en la misma direccin (por ejemplo 10 significa lo
contrario si el tem est enunciado de manera positiva o negativa). Los valores del ndice de
alfa de Cronbach obtenidos oscilaron entre 0.8 y 0.96, lo que indica un alto grado de
fiabilidad para el uso de estos cuestionarios como herramienta para determinar las actitudes
hacia las ciencias.
La segunda forma de obtener evidencias sobre las actitudes generadas por la
enseanza fue estimando el grado de interaccin de los alumnos con personas ajenas al aula
generados por aspectos tratados en el desarrollo de los temas. Este grado de interaccin se ha
estimado por el nmero de veces que los alumnos afirmaban haber hablado de algn aspecto
de los temas tratados en la clase con personas ajenas a la misma (y del nmero de personas).
Para asegurarnos de que esta interaccin era debida a la enseanza, cada una de las cuatro
muestras se dividi al azar en dos mitades, a una de ellas se les entreg un cuestionario con
algunas preguntas formuladas en lenguaje no tcnico- sobre aspectos que iban a ser tratados
en los temas objeto de enseanza (sobre los ciclos y simetras del Sol las estaciones del ao y
la organizacin del plano del horizonte), para que obtuvieran cinco respuestas de personas
ajenas al aula. A la otra mitad se les entreg otro cuestionario que trataba sobre aspectos que
no tenan nada que ver con lo que sera objeto de enseanza y se les pidi tambin que
obtuvieran cinco respuestas de personas ajenas al aula. Segn las teoras clsicas de la
motivacin, a la mitad de los alumnos se les estaba favoreciendo la posibilidad de influir y
destacar sobre otras personas, pues al desarrollar los temas iban a adquirir conciencia de los
errores de los otros (que, inicialmente, coincidan con los suyos propios), a saber en qu y por
qu se equivocaban, y, por tanto, a diferenciarse a adquirir poder sobre personas (incluso
sobre sus padres que siempre estn diciendo que no saben nada). Si la enseanza por
investigacin no tuviera un gran efecto (positivo) sobre los estudiantes, cabra esperar que
hubiera diferencias significativas entre aquellos a los que se les haba propiciado
inicialmente la oportunidad de separarse y destacar sobre los dems y aqullos a los que
no. En ningn momento los profesores implicados supieron quienes haban pasado uno u otro
cuestionario (fueron otras personas quienes realizaron el sorteo, distribuyeron, recogieron y
gestionaron los cuestionarios).
Las preguntas que se les formularon al final del curso fueron:
1.- Con cuntas personas has hablado, sobre algunos aspectos tratados en clase?
2.- Es posible que con alguna de las personas hayas hablado ms de una vez. Estamos
interesados en contabilizar el nmero total de veces que has interaccionado con las
personas. El nmero total de veces ha sido
978-84-695-8363-0
1617
Discusin
Los resultados de la Tabla 3 muestran, claramente, una actitud final positiva en todos
los grupos (valores medios de los tems positivos en torno al 7).
Para mostrar que el cambio actitudinal positivo se produca independientemente de la
actitud inicial, hemos hallado para cada individuo el valor medio de sus puntuaciones a todos
los tems formulados positivamente, y hallado la media de dichos valores para todos los
alumnos que tenan una de las tres actitudes iniciales categorizadas. Los valores medios de
estos tems de los alumnos con actitud inicial negativa, neutra y positiva han sido: 7.14 1.52
(n=113); 7.57 1.17 (n=48) y 7.46 0.91 (n=53), respectivamente, no existiendo diferencias
significativas entre ellos (ANOVA F2,211 = 2.143, p = 0.12).
Tabla 3
Efecto sobre las actitudes de los futuros maestros de primaria de la enseanza problematizada sobre
ciclos y simetras del movimiento del Sol y el modelo Sol/ Tierra, en las cuatro muestras, en funcin
del profesor (A y B) y ao (1/2) (*) (1) En negrita, tems que expresan una actitud negativa
978-84-695-8363-0
1618
Tabla 3
(Continuacin)
978-84-695-8363-0
1619
Tabla 4
Actitud de los futuros maestros media al final de la enseanza problematizada sobre ciclos y simetras
del Sol y el Modelo Sol/ Tierra en funcin del nivel de aprendizaje conseguido en las dos pruebas
realizadas (ciclos y modelo)
NIVEL ALCANZADO SOBRE CICLOS Y SIMETRAS EN EL
MOVIMIENTO DEL SOL
Como vemos, las actitudes mejoran con el nivel de aprendizaje conseguido (aprender
motiva, y aprender mejor, ms!), pero quienes no consiguen el nivel aceptable en los
indicadores de comprensin, tienen una valoracin media de los tems formulados
positivamente de 6.8. Posiblemente hayan advertido su avance y consideran su situacin
como provisional y accesible la posibilidad de lograr hacerlo bien. De hecho, en el examen
final (los valores de las ltimas pruebas son de mediados de diciembre, y el examen final es
hacia el final de enero) el porcentaje de alumnos que supera los indicadores de comprensin
es mayor que los que lo han conseguido al pasar las pruebas en situacin experimental.
Por ltimo mostramos el grado de interaccin con personas ajenas al aula que genera
la enseanza recibida, en aqullos que pasaron uno u otro cuestionario:
Tabla 5
Interacciones de los alumnos con personas ajenas al aula sobre los temas tratados en clase. Se indica
el nmero medio de veces que hablaron y el nmero medio de personas con las que hablaron en
funcin del cuestionario que pasaron a personas de su entorno
Grupo
A1
1.69 (1.31)
1.21 (1.42)
1.79 (1.54)
1.07 (1.25)
B1
4.48 (4.32)
3.36 (2.90)
3.17 (1.39)
2.96 (2.91)
A2
4.68 (3.87)
3.68 (4.24)
4.73 (3.60)
4.42 (2.76)
B2
7.54 (6.40)
6.64 (4.98)
5.96 (5.32)
4.73 (2.19)
Global
4.51 (4.76)
3.55 (3.94)
3.82 (3.64)
3.10 (2.73)
978-84-695-8363-0
1620
Discusin
Los resultados muestran que la enseanza problematizada de los temas de ciencias
estudiados produce unas actitudes muy positivas hacia la enseanza/aprendizaje de las
ciencias. Por otro lado este cambio de actitudes, siempre hacia positivas, es independiente de
la actitud inicial, es decir aunque inicialmente tuvieran actitudes negativas, la enseanza
utilizada supuso una mejora de la actitud hacia las ciencias en todos los casos. Adems, las
actitudes hacia las ciencias son positivas incluso en aquellos alumnos que no han conseguido
los indicadores de aprendizaje pretendidos. Finalmente cabe destacar que no se encuentran
diferencias significativas en las interacciones con personas ajenas al aula entre los alumnos
que pasan el cuestionario de astronoma y los dems. Esto demuestra que la enseanza ha
debido de tener un gran efecto positivo, ya que si la enseanza por investigacin no tuviera
este efecto sobre los estudiantes, cabra esperar que hubiera diferencias significativas entre
aquellos a los que se les haba propiciado inicialmente la oportunidad de separarse y
destacar sobre los dems y aqullos a los que no.
Referencias
Appleton, K. (1995). Student teachers confidence to teach science: is more science
knowledge necessary to improve self-confidence? International Journal of Science
Education, 17(3), 357-369.
Gil Prez, D. y Martnez Torregrosa, J. (2005). Para qu y cmo evaluar?. En D. Gil Prez,
B. Macedo, J. Martnez Torregrosa, C. Sifredo Barrios, P. Valds y A. Vilches Pea
(Eds.), Cmo promover el inters por la cultura cientfica? Una propuesta didctica
fundamentada para la educacin cientfica de jvenes de 15 a 18 aos (pp. 159-182).
Santiago de Chile: Oficina Regional de Educacin de la UNESCO para Amrica
Latina y el Caribe.
Hickey, D. T., Zuiker, S. J., Taasoobshirazi, G., Schafer, N. J. y Michael, M. A. (2006).
Balancing varied assessment functions to attain systemic validity: three is the magic
number. Studies in Educational Evaluation, 32, 180-201.
Martnez Torregrosa, J., Osuna Garca, L. y Martnez Sebastin, B. (2011). Iniciacin a la
astronoma
diurna
(2).
Disponible
en:
http://rua.ua.es/dspace/bitstream/10045/21680/6/5.%20Indicadores_de_comprension%2
0Astronomia.pdf
978-84-695-8363-0
1621
Resumen
El presente estudio forma parte del proyecto I+D+I EDU 2009-14773-C02 (Impacto de la
implantacin de sistemas de calidad en centros educativos), financiado por el actual
Ministerio de Economa y Competitividad. El trabajo aqu presentado tiene como objetivo
validar un instrumento para evaluar el impacto de los Sistemas de Gestin de la Calidad en
los centros educativos sobre. Partiendo de una amplia fundamentacin terica, el
instrumento se dise y aplic a 994 docentes y miembros de equipos directivos de centros
educativos de varias Comunidades Autnomas de Espaa, alcanzando una fiabilidad
excelente (=.955). Finalmente, se analiz su validez de constructo mediante Modelos de
Ecuaciones Estructurales (SEM), alcanzando valores altamente satisfactorios
(CMIN/DF=4.831, IFI=.917, RMSEA=.057, PRATIO=.926). As, el instrumento diseado
para medir el impacto de los sistemas de gestin de calidad en los centros educativos rene
las caractersticas tcnicas exigidas para ser considerada una herramienta vlida y fiable.
978-84-695-8363-0
1622
Introduccin
En las ltimas dcadas se han venido implantando en numerosos centros educativos de
distintos niveles (desde infantil hasta la educacin superior) y en muchos pases, sistemas de
gestin de la calidad como planes que permiten introducir mejoras sustentadas en los
resultados de procesos evaluativos que abarcan a toda la organizacin en sus distintos
componentes. En unos casos se apoyan en modelos de gestin como las Normas ISO, en otros
en modelos de Gestin de Calidad Total, como el Modelo de Excelencia Europeo (EFQM).
Todos ellos pretenden incorporar sistemas diseados intencional y tcnicamente para
paulatinamente incorporar planes de mejora y elaborar planes estratgicos que permitan
disear los resultados que el centro pretende conseguir en un periodo de tiempo, basados en
el anlisis o diagnstico de la realidad de ese centro concreto.
Parece evidente que su implantacin debe generar las mejoras pretendidas, pero el
escaso nmero de investigaciones que se han realizado en esta lnea no muestran evidencias
empricas consistentes de dichos cambios y no presentan resultados unvocos sobre la utilidad
de los sistemas de gestin de calidad en el mbito escolar (Gibb, 2003; De Vries, 2005).
Aunque algunos estudios parecen mostrar que se consiguen mejoras sustanciales en la
educacin (Chen, Lyu y Lin, 2004; Dobyns y Carwford-Mason, 1994; Kattaman y Johnsosn,
2002; Stensaker, 2007; Tribus, 1993), otros trabajos indican que sus efectos son irrelevantes o
incluso perjudiciales. En nuestra experiencia, venimos constatando que los centros que han
implantado estos sistemas desde hace unos aos muestran su satisfaccin y manifiestan
claramente los cambios a los que les ha conducido. Por ello, es necesario incrementar la
investigacin, profundizando en el conocimiento de lo que es una realidad en los centros,
teniendo en cuenta adems el progresivo aumento de centros educativos que estn
implantando estos sistemas. De aqu el sentido y significado de este estudio, dirigido a
valorar el impacto de la implantacin de los sistemas de gestin de la calidad en las
organizaciones a travs de instrumentos de recogida de informacin, elaborados y validados
tcnicamente para garantizar la validez de los resultados obtenidos. En este trabajo nos
centramos en este ltimo aspecto, abordando la validacin de un instrumento, elaborado para
una investigacin de mayor alcance, que permita obtener resultados igualmente vlidos y
aportar una herramienta para estudios que posteriormente pudieran realizarse.
Es necesario aclarar que los cambios a los que se refieren en este trabajo no son tanto
los inmediatos que se producen tras la aplicacin de un plan de mejora sino
fundamentalmente a aquellos que se van consolidando e integrando en la organizacin,
modificando progresivamente la cultura en la forma de pensar y hacer en la organizacin,
tales como la forma de planificacin, el sistema de gestin y toma de decisiones, el clima, etc.
(Fernndez Daz, 2013). Es lo que para nosotros se denomina impacto, aplicado en este caso
a la implantacin de un sistema de gestin de la calidad. Es el que produce cambios
sostenibles en las organizaciones y, en consecuencia, de mayor inters para los centros
educativos.
En este contexto, la medida para la evaluacin del impacto es un factor clave. Hasta el
momento la implantacin de estos sistemas no han incorporado un plan de evaluacin de este
impacto, planificado desde el principio con el tipo de diseo ms adecuado para valorar su
eficacia, ni existen instrumentos o tcnicas de recogida de informacin de acuerdo a los
objetivos de la implantacin. Por todo ello, no se han podido realizar estudios longitudinales
de seguimiento continuado, ni estudios iniciales que hubieran permitido recoger datos de
referencia y comparacin con los resultados finales (Fernndez Daz, 2013). Ante estas
978-84-695-8363-0
1623
Mtodo
Muestra
Para poder realizar el estudio psicomtrico del instrumento, se aplic, durante el
primer bimestre de 2012, el cuestionario a un total de 994 sujetos (792 profesores y 202
miembros del equipo directivo) pertenecientes a un total de 40 centros educativos (14 de la
Comunidad de Madrid, 15 de Castilla y Len y 11 de Pas Vasco).
Instrumento
Basndonos en una extensa revisin bibliogrfica sobre los sistemas de gestin de la
calidad y las organizaciones educativas, el instrumento final qued configurado por cuatro
grandes dimensiones, y sus respectivas subdimensiones, dando lugar a un total de 43 tems
(ver Tabla 1). De este modo, profesores y miembros del equipo directivo deban valorar el
grado de mejora, de eficacia o de desarrollo de cada uno de dichos tems, como consecuencia
de la implantacin del Sistema de Gestin de Calidad en el centro, atendiendo a una escala de
1 a 5 de tipo Likert (donde 1=Nada y 5=Mucho) (ntese que en la Tabla 1 se incluyen los
tems del instrumento final, respetando su numeracin inicial para ver la correspondencia con
los anlisis que se presentarn en apartado de Resultados).
Tabla 1
Relacin de dimensin, subdimensiones e tems del instrumento final de medida del impacto de los
Sistemas de Gestin de Calidad en los centros educativos
Sistema de
Comunicacin
DIM
SUBDIMENSIN
Eq. Directivo Profesores
Dpto.
Orientacin y
coordinadores Profesores
Entre prof.
Clim
a
Centro - Familia
Relacin Eq.
Directivoprofesores
TEMS
6.Las vas de comunicacin del equipo directivo hacia los profesores
11.Las vas de comunicacin de los profesores hacia el equipo directivo
7.Las vas de comunicacin de los coordinadores hacia los profesores
8.Las vas de comunicacin del Dpto. de orientacin hacia los profesores
12.Las vas de comunicacin de los profesores hacia los coordinadores
13.Las vas de comunicacin de los profesores hacia el Dpto. Orientacin
10.Las vas de comunicacin entre el profesorado
9.Las vas de comunicacin del centro hacia las familias
14.Las vas de comunicacin de las familias hacia el centro
19.La existencia de buen clima profesional, entre ED y profesorado
20.Que la relacin entre los profesores, en general, sea positiva
21.Que el ED se preocupe de favorecer un clima positivo en el centro
Relacin prof.
alum. fami.
Eval. del clima
Gestin de
resolucin de
conflictos
Satisfaccin
Colaboracin
entre profesores
En el personal
Relaciones externas
Con otros
organismos
Programas de
movilidad
Imagen del
centro
Uso de recursos
del entorno
978-84-695-8363-0
1624
22.Que, en general, exista una relacin cordial entre las familias y centro
23.Que el profesorado controle de forma adecuada la disciplina
24.Que exista una relacin y trato correcto entre profesores y alumnos
25.La evaluacin sistemtica del clima de centro
26.Las medidas tomadas con los alumnos problemticos son ms eficaces
27.Las medidas tomadas con profesores problemticos son ms eficaces
28.Llos profesores se forman en habilidades para resolucin de conflictos
29.E l centro gestione ms eficazmente los conflictos
30.Han mejorado las habilidades de resolucin de conflictos del profesorado
31.Que el ED se muestra eficaz al resolver conflictos en el centro
32.La cooperacin entre los profesores en la preparacin de eventos
34.El inters de los profesores por participar en proyectos de innovacin
35.El inters de los profesores por aprender nuevas metodologas
36.El intercambio de experiencias entre profesores
37.El centro evale la colaboracin de los profesores en eventos del centro
41.En el profesorado
42.En el alumnado
43.En las familias
44.En el PAS
47.El grado de relaciones que el centro ha establecido con otros organismos, como
instituciones financieras, proveedores, etc.
48.El beneficio que el centro obtiene de las relaciones institucionales con los
organismos anteriormente mencionados
50.Se llevan a cabo sistemticamente programas de intercambio para impulsar el
aprendizaje de idiomas
51.Se llevan a cabo sistemticamente programas de movilidad para favorecer el
aprendizaje y la prctica deportiva
52.Se llevan a cabo sistemticamente programas de movilidad para potenciar la
prctica y participacin en torneos educativos
53.Se realizan acciones especficas para fortalecer los convenios de intercambio y
movilidad de los estudiantes
54.El centro ha mejorado su imagen en su entorno en los tres ltimos aos
55.El centro ha obtenido reconocimientos en medios de comunicacin
56.El centro realiza acciones concretas para la mejora de su prestigio
57.Se utilizan los recursos ofrecidos por el entorno (Ayuntamiento, etc.)
58.Se evalan los beneficios del uso de los recursos ofrecidos por el entorno
59.Como consecuencia de esta evaluacin, se realizan acciones concretas para un
mayor aprovechamiento de los recursos ofrecidos por el entorno
Procedimiento
Para conseguir la participacin de los profesores y miembros del equipo directivo se
concert una entrevista inicial con el director y el responsable de calidad de los centros, donde
se explic el objetivo de estudio, el procedimiento a seguir y donde se marcaron las fechas de
aplicacin del cuestionario. Para dicha aplicacin, los miembros del equipo de investigacin
se desplazaron a los centros en la fecha acordada, asegurando el total anonimato y
confidencialidad de las valoraciones y resultados. De igual modo, se asegur a los equipos
directivos la remisin de un informe de su centro con resultados obtenidos en los anlisis, con
el objeto de que la colaboracin de los centros fuese de utilidad para ellos mismos.
Resultados
Tras un estudio inicial descriptivo de las respuestas, donde no se encontr ningn
comportamiento irregular en la variabilidad y tendencia central de los tems, se estudi la
fiabilidad del instrumento calculando el alfa de Cronbach con el paquete informtico SPSS
978-84-695-8363-0
1625
19. Se obtuvo un nivel de fiabilidad excelente para el instrumento de forma global ( = 0,955)
y por dimensiones (Comunicacin, Relaciones externas, Clima y Satisfaccin con valores de
de 0,93, 0,932, 0,967 y 0,863 respectivamente). Cabe sealar que dichos valores no se
vieron alterados tras las modificaciones realizadas al instrumento final, de acuerdo a los
resultados del Anlisis Factorial Confirmatorio, lo cual indica la pertinencia de las
modificaciones realizadas.
Habindonos fundamentado en la literatura consultada para la configuracin de la
estructura y los tems del instrumento, se realiz un anlisis factorial confirmatorio mediante
la aplicacin de metodologa S.E.M. (Structural Equation Modeling), con la ayuda de la
herramienta informtica AMOS 16, para valorar la validez de constructo del instrumento.
Para ello, se propuso un Modelo inicial de medida en el que se incluyeron todos los
indicadores previstos en la teora. Dicho modelo consta de 4 variables latentes, 61 variables
observadas (correspondientes a los 61 tems iniciales de los que se compuso el instrumento,
de V1 a V61) y 61 trminos de error (de e1 a e61). Asimismo, se definieron 61 cargas
factoriales y 61 pesos de regresin entre los trminos de error y sus variables asociadas. Se
incluyeron las seis correlaciones entre los factores latentes principales y se consideraron
incorrelacionados todos los trminos de error. Una vez especificado el modelo, se procedi a
la estimacin de los parmetros del modelo por el procedimiento de Mxima Verosimilitud
(Maximum Likelihood, ML). Entre los resultados de este modelo (Tabla 2), encontramos
cmo el ndice de ajuste del modelo IFI = .724 se sita por debajo del .90 requerido, segn
Kline (2010), debido, en parte, a cargas factoriales insatisfactorias de los tems 2, 17, 18, 45 y
46 (por debajo del valor .50 sealado por Byrne, 2010, como necesario), por lo que dichos
tems fueron eliminados.
Tabla 2
Resumen de los ndices de ajuste de los modelos inicial y final de medida del impacto
Medida
CMIN/DF
IFI
PRATIO
RMSEA
HOELTER .05
Valor
recomendado
2-5
>.9
>.7
<.06
>200
Valor Modelo
Inicial
9.39
.724
.963
.092
112
Valor Modelo
Final
4.83
.917
.926
.057
223
Por otro lado, la tabla de ndices de modificacin mostraron correlaciones entre los
trminos de error de diversas variables, por lo que, basndonos en nuestra fundamentacin
terica, pareca oportuna la inclusin de diversas variables latentes (Relaciones con otros
organismos, Movilidad, Imagen del Centro, Uso de recursos, Colaboracin entre profesores,
Resolucin de conflictos, Relaciones entre profesores-estudiantes-familias, Relacin
profesor-equipo directivo, Comunicacin profesores-equipo directivo, Comunicacin
departamento de orientacin-profesores y Comunicacin familia-centro). De igual modo, se
encontraron trece tems (1, 3, 4, 5, 15, 16, 33, 38, 39, 40, 49, 60 y 61) que presentaban
mltiples saturaciones en diferentes dimensiones y subdimensiones, por lo que se opt por la
eliminacin de los mismos. Finalmente, una vez realizadas dichas modificaciones, se encontr
la conveniencia de algunas covariaciones entre trminos de error, siendo algunas de ellas
justificables desde un punto de vista terico (e42-e43, ya que los dos aluden a la satisfaccin,
e6-e7, e8-e13 y e11-e12, pues hacen referencia a la al sistema de comunicacin del centro,
entre otras).
978-84-695-8363-0
1626
978-84-695-8363-0
1627
eED
eOO
e47
e48
v47
,92
v48
,73
EDprofes.
con otros
organism.
,90
,91
e50
e51
e52
v52
e53
v53
e54
v54
e55
v55
e56
v56
e57
v57
,79
movilidad
e59
,55
,75
,85
,82
D.O.Profes.
,90
Relac.
Externas
,86
,70
,90
Sist.
Comunic.
eF
eI
imagen
centro
,81
e6
v11
e11
v7
e7
v8
e8
v12
e12
v13
e13
v14
e14
v9
e9
,48
,78
,40
,49
,66
,85
,80
,81
FamiliaCentro
,85
,88
,84
e10
,77
,96
e58
,78
,73
v51
v6
eD
,53
eM
v50
,85
v58
v59
uso
recursos
,94
,74
eRe
v37
e37
v36
e36
v35
e35
v34
e34
v32
e32
,59
v26
e26
,63
v27
e27
v28
e28
v29
e29
v30
e30
v31
e31
v22
e22
v23
e23
v24
e24
v19
e19
v20
e20
v21
e21
,77
,64
,63
,64
,85
Colab
Profes.
,28
,37
,87
,80
eC
,92
eRC
e41
v41 en profesores
e42
v42 en alumnos
e43
v43 en f amilias
e44
v44 en PAS
,81
,90
,86
,74
Resol
Conflic
,90
Satis
faccin
,42
,85
Clima
,74
,87
,93
,89
,85
,84
eRpa
,89
Rel
Prof -AlumFam
,93
,41
,86
,93
eR
,94
,69
Rela
ED-Prof.
,91
,90
e25
Figura 2. Modelo estructural final del instrumento de medida del impacto de los Sistemas de Gestin
de Calidad
978-84-695-8363-0
1628
Discusin
Los resultados obtenidos han permitido alcanzar el objetivo de elaborar y validar un
instrumento de medida del impacto de los Sistemas de Gestin de Calidad en las dimensiones
de Sistema de Comunicacin, Relaciones externas, Satisfaccin y Clima del centro. El
anlisis de las caractersticas psicomtricas del cuestionario para medir dicho constructo ha
revelado una fiabilidad global excelente, mostrando as una adecuada consistencia interna.
Los tems incluidos en el instrumento responden al constructo formulado, tal y como se ha
podido comprobar en el anlisis factorial confirmatorio. En este sentido, sin duda, el tamao
muestral obtenido ha sido uno de los elementos clave que ha posibilitado la realizacin de
dicho anlisis (Hair et al., 2009). No obstante, al encontrar una respuesta de participacin
moderada por parte de los profesores, consideramos pertinente ampliar el estudio a una
muestra mayor con el fin de aumentar el poder de generalizacin del mismo. En esta lnea, se
debe tener en cuenta que el tipo de muestreo de carcter incidental, procedimiento comn y
justificado en este tipo de estudios por la voluntariedad del participante, puede afectar a la
validez externa de la investigacin, limitando el poder de generalizacin de los resultados. Del
mismo modo, encontramos otras dimensiones susceptibles de ser incluidas en el modelo, tales
como el Sistema de Gestin del centro o el Proceso de enseanza-aprendizaje.
Por otro lado, el anlisis factorial confirmatorio mostr, igualmente, una slida y
robusta configuracin de las dimensiones y subdimensiones que subyacen al instrumento: el
Sistema de comunicacin (a travs de la comunicacin vertical entre equipo directivo,
departamento de orientacin y profesores, y de la comunicacin horizontal entre profesores),
el Clima (compuesto por la colaboracin entre profesores, la gestin de la resolucin de
conflictos, la relacin entre profesores-alumnos-familia, y por la relacin entre el equipo
directivo y los profesores), la Satisfaccin (de profesores, alumnos, familias y PAS) y las
Relaciones externas del centro (con otros organismos, los programas de movilidad, la mejora
de la imagen del centro y el uso de recursos del entorno), encontrando saturaciones
adecuadas de los tems sobre los factores del clima.
Todo ello debe interpretarse como un indicador de la adecuada validez de constructo
del instrumento de medida y de la satisfactoria estructura dimensional propuesta. De igual
modo, la fundamentacin terica realizada para la elaboracin del instrumento y la seleccin
de expertos en investigacin educativa y de profesionales del mbito docente que juzgaron y
valoraron la configuracin de los tems del instrumento han asegurado una alta validez de
contenido del mismo, por lo que, a modo de conclusin y de acuerdo al objetivo de este
trabajo, se puede afirmar que se ha contribuido al campo cientfico de estudio del impacto de
los Sistemas de Gestin de Calidad en los centros educativos con un instrumento de medida
vlido y fiable.
Referencias
Byrne, B. (2010). Structural equation modelling with AMOS. New York: Taylor and Francis
Group.
Chen, Y., Lyu, J. y Lin, Y. (2004). Education improvement through ISO 9000
implementation: experiences in Taiwan. International Journal of Engineering
Education, 20(1), 91-95.
978-84-695-8363-0
1629
978-84-695-8363-0
1630
Resumen
El trabajo consta de varios aspectos, en primer lugar la adaptacin y construccin de una
escala de motivacin intrnseca/extrnseca y estrategias de aprendizaje -incluyendo la
adaptacin realizada por Albert (2011) del MSLQ-r-, y algunos tems propios. En segundo
lugar, la elaboracin de una escala de preferencia metodolgica (modelos centrados en
enseanza o en aprendizaje) desde el punto de vista del alumnado, utilizando para ello la
estructura dimensional del CEMEDEPU (Gargallo et al., 2011). A partir de estas escalas
estudiamos las relaciones existentes entre: motivacin, estrategias de aprendizaje,
preferencia metodolgica y rendimiento. El estudio se ha realizado con 211 discentes de la
provincia de Valencia en distintos niveles educativos (PCPI, ESO, CFGM, CFGS y
Bachiller). Las escalas adaptadas obtienen niveles de fiabilidad altos. Los resultados
muestran que motivacin intrnseca correlaciona significativamente con estrategias de
aprendizaje en todas las etapas, salvo PCPI. Asimismo, rendimiento escolar correlaciona
significativamente con los diferentes tipos de motivacin analizados; motivacin intrnseca en
ESO/Bachiller y motivacin extrnseca con CFGM/CFGS.
978-84-695-8363-0
1631
Introduccin
Desde diversas posiciones tericas e investigaciones recientes se enfatiza la
importancia de atender tanto a los componentes cognitivos como a los componentes
motivacionales implicados en el aprendizaje. En el proceso educativo intervienen diversos
factores que hacen que sea complejo y multifactorial. En esta lnea, y con la intencin de
clarificar algunas de las variables implicadas, hemos abordado las estrategias de aprendizaje,
las preferencias metodolgicas y la motivacin, relativas al alumnado en distintas etapas
educativas.
Las estrategias de aprendizaje constituyen en la actualidad, una de las reas ms
activas en el campo de la evaluacin e intervencin psicoeducativa (Monereo y Castell,
1997). Las estrategias de aprendizaje pueden entenderse como el conjunto organizado,
consciente e intencional de lo que hace el aprendiz para lograr con eficacia un objetivo de
aprendizaje en un contexto social dado. Actuar estratgicamente supone querer aprender
eficazmente y disear y ejecutar planes de accin ajustados a las metas previstas y a las
condiciones del contexto, seleccionando y poniendo en marcha procedimientos, habilidades y
tcnicas eficaces para aprender (Garca y Pintrich, 1993) cuya efectividad ha de evaluarse
para modificar lo que se precise. Las estrategias de aprendizaje integran elementos afectivomotivacionales y de apoyo (querer, lo que supone disposiciones y clima adecuado para
aprender), metacognitivos (tomar decisiones y evaluarlas, lo que implica la autorregulacin
del alumno) y cognitivos (poder, lo que comporta el manejo de estrategias, habilidades y
tcnicas relacionadas con el procesamiento de la informacin) (Abascal, 2003; Gargallo,
2000).
En cuanto al anlisis de las preferencias metodolgicas docentes que posee el
alumnado en Secundaria, hemos diferenciado stas en dos grandes modelos (Samuelowicz y
Bain, 2001); un modelo centrado en la enseanza y otro centrado en el aprendizaje.
A partir de diferentes trabajos de investigacin (Alonso y Mndez, 1999; Biggs, 2005;
Garca-Valcrcel, 1993; Monereo y Pozo, 2003), consideramos al modelo centrado en la
enseanza como el tipo de metodologa docente de carcter tradicional, centrado en el
docente, de transmisin de informacin, expositivo, etc. Y al modelo centrado en el
aprendizaje como el tipo de metodologa docente relacionada con un modelo constructivista,
centrado en el alumno, de facilitacin del aprendizaje, etc.
En referencia a la motivacin, la mayora de autores realizan esta distincin entre
motivacin intrnseca y extrnseca (Alonso-Tapia, 1995; Garca y Pintrich, 1993; Huertas,
1997). Parece haber coincidencia entre literatura especializada en vincular a la motivacin
intrnseca con aquellas acciones realizadas por el inters que genera la propia actividad,
considerada como un fin en s misma y no como un medio para alcanzar otras metas. En
cambio, la orientacin motivacional extrnseca, se caracteriza generalmente como aquella que
lleva al individuo a realizar una determinada accin para satisfacer otros motivos que no estn
relacionados con la actividad en s misma, sino ms bien con la consecucin de otras metas
978-84-695-8363-0
1632
que en el campo escolar suelen fijarse en obtener buenas notas, lograr reconocimiento por
parte de los dems, evitar el fracaso, ganar recompensas, etc.
En cuanto a los objetivos del presente estudio, se plantean los siguientes:
1. Determinar la motivacin, las preferencias metodolgicas y las estrategias de
aprendizaje del alumnado por etapas.
2. Buscar relaciones posibles entre la motivacin, las preferencias metodolgicas, las
estrategias de aprendizaje y el rendimiento acadmico del alumnado por etapas.
Mtodo
Diseo
El trabajo se basa en un diseo de encuestas en el que se utiliz el cuestionario como
tcnica de recogida de informacin (Orellana, Almerich y Surez, 2010).
Muestra
La muestra compuesta por 210 alumnos de las distintas etapas de Educacin
Secundaria ver tablal 1-. Todos ellos con edades comprendidas entre los 12 y los 45 aos,
procedentes de diversos centros de la Comunidad Valenciana, tanto pblicos como privados y
concertados. Los cuestionarios se pasaron de forma personal (cara a cara) durante el mes de
mayo de 2012.
Tabla 1
Caractersticas de la muestra atendiendo a las variables Etapa y Sexo
Mujer
Etapa
ESO
Bachiller
PCPI
FP grado medio
FP grado superior
Recuento
% de la fila
% del N de la columna
% del N de la tabla
Recuento
% de la fila
% del N de la columna
% del N de la tabla
Recuento
% de la fila
% del N de la columna
% del N de la tabla
Recuento
% de la fila
% del N de la columna
% del N de la tabla
Recuento
% de la fila
% del N de la columna
% del N de la tabla
50
59,5%
41,3%
23,8%
25
53,2%
20,7%
11,9%
16
55,2%
13,2%
7,6%
8
36,4%
6,6%
3,8%
22
78,6%
18,2%
10,5%
Sexo
Hombre
34
40,5%
38,2%
16,2%
22
46,8%
24,7%
10,5%
13
44,8%
14,6%
6,2%
14
63,6%
15,7%
6,7%
6
21,4%
6,7%
2,9%
Total
84
100,0%
40,0%
40,0%
47
100,0%
22,4%
22,4%
29
100,0%
13,8%
13,8%
22
100,0%
10,5%
10,5%
28
100,0%
13,3%
13,3%
Total
978-84-695-8363-0
Recuento
% de la fila
% del N de la columna
% del N de la tabla
1633
121
57,6%
100,0%
57,6%
89
42,4%
100,0%
42,4%
210
100,0%
100,0%
100,0%
Instrumentos
Para poder establecer una serie de tems que midan las preferencias metodolgicas en
el alumnado de la etapa de Secundaria, hemos realizado una adaptacin propia de un
cuestionario validado con alumnado universitario, en este caso se trata del CEMEDEPU
(Cuestionario de Evaluacin de la Metodologa Docente y Evaluativa de los Profesores
Universitarios; Gargallo, Surez, Garfella y Fernndez, 2011). Este cuestionario evala la
concepcin del aprendizaje, la metodologa de enseanza y evaluacin, y las habilidades
docentes del profesor competente.
Para poder establecer tems que midan la motivacin y la actitud del alumnado, hemos
realizado una adaptacin del cuestionario MSLQ (Motivated Strategies Learning
Questionnaire; Albert, 2011). La adaptacin propia ha consistido en aadir a los tems del
instrumento anterior otros reactivos que miden motivacin extrnseca. Es por ello, que se ha
ampliado el conjunto total de tems, siendo un aadido en la misma lnea de trabajo del
instrumento elegido.
En consecuencia y debido a las adaptaciones realizadas en base a instrumentos de
evaluacin anteriormente validados, hemos visto adecuado realizar un anlisis de la fiabilidad
de las propias adaptaciones desarrolladas en nuestro proceso de investigacin.
Por todo ello, los resultados del anlisis de fiabilidad en base a nuestra adaptacin del
cuestionario MSLQ, han sido muy positivos ya que, hemos conseguido un Alfa de Cronbach
de .917 en general; pudiendo observar tambin sus propiedades mtricas entre sus distintos
sub-apartados que forman la escala. En cuanto a la motivacin intrnseca (Alfa de Cronbach
.862 y en sus respectivos factores: autoeficacia .890, ansiedad .685 y orientacin
motivacional .849-). Los reactivos que conforman la motivacin extrnseca, un Alfa de
Cronbach de .780. Y respecto a las estrategias de aprendizaje, un Alfa de Cronbach de .841 con factores como autorregulacin .554 y estrategias .825-.
Asimismo, para poder seguir evaluando la fiabilidad de las adaptaciones realizadas,
hemos considerado enriquecedor realizar tambin este anlisis en relacin a los tems
utilizados en base al cuestionario CEMEDEPU. Los resultados son positivos y hacen
referencia a un Alfa de Cronbach de .833.
Resultados
En cuanto a motivacin, las puntuaciones de motivacin intrnseca han sido superiores
a la de motivacin extrnseca en todas las etapas. Como se puede observar ver grfico 1-, el
alumnado con una motivacin intrnseca mayor se corresponde con el Ciclo Formativo de
Grado Superior (5.11 en una escala de 1-7), seguidos por el resto de etapas con puntuaciones
muy parecidas entre ellas (4.66 Ciclo Formativo de Grado Medio, 4.97 PCPI, 4.95 en PCPI,
4.76 Bachiller y 4.87 ESO).
978-84-695-8363-0
1634
6,00
5,00
4,00
Motivacin intrnseca
3,00
Motivacin extrnseca
2,00
Estrategias de
aprendizaje
1,00
,00
ESO
Bachiller
PCPI
CFGM
CFGS
Etapa
En un sentido amplio, los resultados obtenidos en base a otros anlisis de las variables
implicadas en el estudio, muestran que la motivacin intrnseca correlaciona de forma
978-84-695-8363-0
1635
significativa con las estrategias de aprendizaje en todas las etapas, salvo en PCPI59 (.74**,
.564**, .73**, .459**). Asimismo, el rendimiento escolar correlaciona significativamente con
los diferentes tipos de motivacin analizados; mientras que la motivacin intrnseca
correlaciona significativamente con la nota media en los niveles correspondientes de ESO y
Bachiller (.666**, .452**), en cambio la motivacin extrnseca correlaciona negativamente de
forma significativa con el rendimiento en las etapas de CFGM y CFGS (-.594**, -.398**).
Discusin
La muestra ha presentado una mayor orientacin hacia la motivacin intrnseca. Esta
variable ha presentado correlaciones significativas con casi todas las dems (motivacin
extrnseca, estrategias de aprendizaje) en la etapa de la ESO. En este sentido, hemos de tener
en cuenta que la mayora de la muestra estaba formada por alumnos y alumnas de ESO (92 de
211), por lo que al analizar las correlaciones por etapas, este grupo puede presentar mayores
correlaciones significativas. Si el nmero de alumnado en otras etapas hubiera sido mayor, tal
vez podramos haber encontrado ms correlaciones significativas con la motivacin intrnseca
en general.
La variable motivacin intrnseca ha mostrado un gran nmero de correlaciones con la
variable de estrategias de aprendizaje en todas las etapas salvo en PCPI. Tambin ha
correlacionado con rendimiento en las etapas de ESO y Bachiller.
Por lo general, puede ser muy complicado modificar la motivacin intrnseca de un
discente pero, dado que los resultados que se han obtenido en este estudio revelan que la
motivacin intrnseca est muy relacionada con las estrategias de aprendizaje, tenemos a
nuestro alcance una posible va para poder modificar este tipo de motivacin entre el
estudiantado. Asimismo, si entrenamos al alumnado en base a estrategias de aprendizaje, se
podra incrementar su motivacin intrnseca, as como su rendimiento acadmico. Esto podra
cambiar el modelo desde el cual el estudiante se sita frente al conocimiento, orientndose
ms hacia el modelo centrado en el aprendizaje, puesto que tambin esta variable se relaciona
con las estrategias de aprendizaje; por ejemplo, podemos observar en la etapa de ESO una
correlacin significativa (.474**) entre las estrategias de aprendizaje y el rendimiento
acadmico. Este dato nos muestra que existe relacin directa entre el rendimiento acadmico
y la manera de enfrentarse al aprendizaje. En esta lnea, ya son multitud de estudios e
investigaciones los que afirman que existe una relacin directa entre el rendimiento
acadmico y la utilizacin de estrategias de aprendizaje por parte del alumnado en su proceso
de enseanza y aprendizaje (Cano y Justicia, 1991; Lara, 1992; Gonzlez, 1996; Prevatt,
Petscher, Proctor. Hurst y Adams, 2006).
En otro orden de cosas, aparecen datos interesantes respecto a otras correlaciones
encontradas entre la variable motivacin intrnseca/extrnseca y entre los dos modelos
metodolgicos (centrado en el aprendizaje y centrado en la enseanza). Esto nos hace
cuestionarnos si existe una dicotoma total entre motivacin intrnseca y extrnseca, entre los
dos modelos metodolgicos. Si las variables motivacin intrnseca y motivacin extrnseca
fueran independientes, no correlacionaran nunca; por tanto los resultados obtenidos en este
estudio nos dan motivos para apoyar la idea de que no existe esta dualidad dentro de la
motivacin.
59
978-84-695-8363-0
1636
Adems, podemos observar la disparidad entre los resultados entre las distintas etapas,
puesto que no se dan las mismas relaciones en todas por igual. Este hecho hace que nos
cuestionemos si las variables que hemos tenido en cuenta son las correctas o, si pueden existir
otras variables que estn perturbando las relaciones entre las relaciones que s hemos
analizado.
En esta misma lnea, los alumnos y alumnas de PCPI estn en contacto con
condicionantes educativos especiales, lo que puede conllevar una visin de la educacin
basada en el control externo y en la motivacin externa, como medio de estudio, debido a las
carencias que los mismos han desarrollado en cursos anteriores. Por el contrario, estudiantes
que se encuentran en bachiller, el factor que ms les motiva podr desarrollarse ms
fcilmente de forma intrnseca, debido a un planteamiento hacia la autogestin de forma
habitual. Por lo que, sera relevante realizar futuras investigaciones en el campo de los PCPI,
CFGM y CFGS para poder entender mejor estas diferencias con respecto a las etapas de ESO
y Bachiller.
Referencias
Abascal, J. (2003). El s mismo en los procesos de enseanza-aprendizaje. En Ma.V. Trianes
y J.A. Gallardo (Coords.), Psicologa de la educacin y del desarrollo (pp. 496-522).
Madrid: Pirmide.
Albert, A. (2011). Validacin del motivated strategies learning questionnaire en educacin
secundaria. Valncia: Universitat de Valncia.
Alonso, F., y Mndez, R. M. (1999). Modelos de enseanza de los profesores y enfoques de
aprendizaje de los estudiantes: Un estudio sobre su relacin en la Universidad de
Santiago de Compostela. Adaxe, 14-15, 131-147.
Alonso-Tapia, J. (1995). Motivacin y aprendizaje en el aula. Cmo ensear a pensar.
Madrid: Santillana.
Biggs, J. (2005). Calidad del aprendizaje universitario. Madrid: Narcea.
Cano, F., y Justicia, F. (1991). Estrategias de aprendizaje, especialidades y rendimiento
acadmico. Revista de psicologa de la educacin, 3(1), 69-86.
Garca, T., y Pintrich, P.R. (1993). Selfschemas, motivational strategies and selfregulated
learning. Comunicacin presentada en el Annual Meeting of the American
Educational Research Association. Atlanta, GA, April 12-16.
Garca-Valcrcel, A. (1993). Anlisis de los modelos de enseanza empleados en el mbito
universitario. Revista Espaola de Pedagoga, 194, 27-53.
Gargallo, B. (2000). Procedimientos. Estrategias de aprendizaje. Su naturaleza, enseanza y
evaluacin. Valencia: Tirant lo Blanch.
Gargallo, B., Surez, J., Garfella, P., y Fernndez, A. (2011). El cuestionario CEMEDEPU.
Un instrumento para la evaluacin de la metodologa docente de los profesores
978-84-695-8363-0
1637
978-84-695-8363-0
1638
Resumen
La investigacin se centra en las competencias docentes, enfocndose en aquellas que le
permiten al profesorado constatar y valorar los aprendizajes logrados por sus estudiantes en
el proceso educativo. Para esto, se dise, valid y aplic el Cuestionario de Autoevaluacin
de Competencias Evaluativas, instrumento mediante el cual los profesores(as) de educacin
primaria pueden revisar y reflexionar en torno a sus capacidades docentes especficamente
relacionadas con la evaluacin. El estudio es de tipo mixto, exploratorio de dos fases:
inicialmente una cualitativa para recoger informacin preliminar de parte del profesorado a
travs de grupos de discusin y posteriormente una de tipo cuantitativo, de aplicacin del
cuestionario previamente diseado. La muestra estuvo constituida por 351 maestros(as) de
distintas zonas de Chile y los resultados obtenidos muestran un nivel entre medio-alto de
dominio de las competencias evaluativas, segn la auto percepcin de los participantes.
Introduccin
La educacin chilena se encuentra en un momento de revisin y replanteamiento de sus
polticas, ya que numerosos estudios han demostrado que los nios y nias de Chile no estn
logrando los aprendizajes esperados para cada nivel y los informes internacionales sealan a
Chile como un pas con grande niveles de inequidad y segregacin educativa.
978-84-695-8363-0
1639
Objetivos de investigacin
- Identificar cules son las Competencias Evaluativas ms adecuadas que el profesorado de
Educacin Primaria de Chile podra desarrollar para mejorar los procesos de enseanza y
de aprendizaje.
- Proponer un instrumento de Autoevaluacin de Competencias Evaluativas Docentes en un
marco actualizado, que facilite la reflexin y por ende la mejora de las prcticas
educativas.
- Diagnosticar la percepcin del profesorado de Educacin Primaria sobre sus propias
competencias evaluativas.
Marco Terico
Modelo de Competencias
Las Competencias representan una combinacin de atributos (con respecto al
conocimiento y sus aplicaciones, aptitudes, destrezas y responsabilidades) que describen el
nivel o grado de suficiencia con que una persona es capaz de desempearlos. Como seala,
Echeverra (2005): La competencia comporta un conjunto de conocimientos, procedimientos,
capacidades y actitudes, complementarios entre s, de tal manera que las personas han de
saber, saber hacer, saber estar y saber ser, para actuar con eficiencia y eficacia
ante las situaciones profesionales (p.20). El saber, se refleja en la Competencia Tcnica, el
saber hacer, en la Competencia Metodolgica, el saber estar en la Competencia
Participativa y el saber ser en la Competencia Personal.
978-84-695-8363-0
1640
Competencias Docentes
Cules son las competencias que debera tener un educador(a)? Qu conocimientos
tericos, prcticos debe poseer? Qu actitudes o comportamientos debe demostrar?
Perrenoud (2001) se refiere a ellas destacando que: El reconocimiento de una competencia
pasa no slo por la identificacin de las situaciones que hay que manejar, de los problemas
que hay que resolver, de las decisiones que hay que tomar, sino tambin por la explicitacin
de los saberes, de las capacidades, de los esquemas de pensamiento y de las necesarias
orientaciones ticas (p.16).
Para llevar a cabo esta investigacin, se han revisado y analizado diversas propuestas,
de autores(as) (como Scriven (1994), Perrenoud (2004) o Danielson (2007), entre otros) y de
sistemas educativos (como Inglaterra, Espaa, Estados Unidos o Chile), quienes han hecho
descripciones de las competencias que debera tener el profesorado para realizar
adecuadamente su labor de enseanza. Estas descripciones, en algunos casos, han sido
denominados estndares, ya que pretenden ser un conjunto de criterios de desempeo para el
profesorado.
Al analizar las propuestas educativas antes mencionadas, se focaliz la mirada en
aquellas competencias directamente relacionadas con la evaluacin, tanto de los aprendizajes
de los (as) nios y nios, como de la propia labor docente en este aspecto, llegando as a
determinar cules deberan ser las Competencias Evaluativas.
Competencias Evaluativas
De acuerdo a la literatura revisada, un(a) docente debera ser capaz de llevar a cabo un
adecuado proceso evaluativo, integrando los conocimientos, procedimientos y actitudes
necesarios, tanto tradicionales como alternativos. As, como resultado del anlisis de diversas
propuestas de autores(as) y experiencias de distintos sistemas educativos y, los aportes del
profesorado de educacin primaria y de expertos en pedagoga, se plante la existencia de
cuatro tipos de Competencias Evaluativas:
- Competencia tcnica (saber): Se refiere a los conocimientos especializados del quehacer
profesional, en este caso en relacin a la pedagoga (en trminos generales) y la evaluacin
(en trminos especficos).
- Competencia Metodolgica (saber hacer): Se refiere a saber aplicar los conocimientos a las
tareas propias de la evaluacin, transfirindolos a situaciones nuevas y encontrando
soluciones adecuadas para las diversas situaciones.
- Competencia Personal (ser): Se refiere a tener una imagen realista de si mismo,
demostrando capacidad de reflexin y buscando las alternativas ms adecuadas para
mejorar su prctica evaluativa.
- Competencia Participativa (saber estar): Implica estar predispuesto al entendimiento
interpersonal, comunicndose asertivamente y cooperando con los estudiantes, las familias
y los colegas para guiar e informar sobre la evaluacin.
978-84-695-8363-0
1641
Autoevaluacin Docente
Este sistema se sustenta en la idea de que slo los propios docentes (o principalmente
ellos) estn capacitados para opinar sobre su prctica, como sealan Orozco, Ponce y Ramos,
(2007): La autoevaluacin de la prctica docente es un proceso en el que los profesores
formulan opiniones valorativas sobre la adecuacin y efectividad de su trabajo como
profesionales responsables de la educacin de un grupo de alumnos. Este conjunto de
valoraciones acerca de su propia actividad en el aula y en la escuela constituye un elemento
imprescindible para mejorar paulatinamente los procesos educativos (p. 50).
La Autoevaluacin requiere, antes que nada, que el docente admita que est haciendo
algo que se podra mejorar, por lo que exige de su parte una actitud reflexiva y con capacidad
de autocrtica, de manera de aceptarse a s mismo como persona y profesor(a); slo una vez
que se acepte como ser perfectible podr trabajar sus debilidades y fortalezas. Destaca la
propuesta de Danielson y McGreal (2000), quienes sostienen que: Los profesores y las
profesoras son muy perceptivos respecto de sus propias competencias y pueden ser (o llegar
a ser) muy precisos en sus apreciaciones. Adems, el acto de auto-evaluacin requiere
reflexin, una actividad que, como ha demostrado la investigacin, favorece el aprendizaje y
el crecimiento profesional (p. 47).
Una vez sintetizado el marco terico que sustenta este trabajo, se presenta a
continuacin la descripcin del diseo y el desarrollo del estudio.
Mtodo
Enfoque metodolgico
Este estudio se est realizando con los aportes de las perspectivas cualitativa y
cuantitativa, recurriendo para esto a la combinacin de mtodos (metodologa mixta), opcin
cada vez ms recurrida por los investigadores en Ciencias Sociales, ya que permite disponer
de una gran variedad de tcnicas e instrumentos para recoger informacin, utilizando aquellos
ms adecuados al problema investigado y al contexto estudiado. Concretamente este trabajo
corresponde a una investigacin mixta de tipo exploratorio, que se caracteriza por estar
constituida por dos fases: primero una cualitativa y posteriormente una cuantitativa.
Recogida de informacin
En la fase inicial, de tipo cualitativo, se realizaron dos grupos de discusin: uno con
profesores y profesoras de educacin primaria chileno y otro con coordinadores pedaggicos
978-84-695-8363-0
1642
de distintas escuelas de Chile, en los que se invit a los participantes a reflexionar en conjunto
sobre cules son las competencias evaluativas que, a su juicio debera tener el profesorado y a
generar conclusiones colectivas en torno a sus competencias evaluativas, cmo identificarlas,
evaluarlas y mejorarlas. Posteriormente, se procedi al diseo, validacin y aplicacin piloto
del Cuestionario de Competencias Evaluativas, lo que dio lugar a la fase cuantitativa, de
aplicacin del instrumento.
El cuestionario consiste en una Escala de Autoevaluacin en la que se solicita al
profesorado que valore su nivel de dominio de distintas competencias evaluativas, divididas
en cuatro dimensiones, constituidas por los tipos de competencia profesional: competencias
tcnicas, metodolgicas, participativas y personales. Junto a cada aspecto la persona debe
escoger entre cinco niveles o categoras de dominio (muy bajo, bajo, medio, alto y muy alto).
A continuacin de la escala, el instrumento presenta para cada tipo de competencia un
espacio abierto en el que se invita a los profesores(as) a redactar libremente en torno a los
aspectos que manejan con mayor facilidad y mayor dificultad respecto de sus competencias
evaluativas.
Anlisis de la informacin
La informacin recogida en los dos grupos de discusin realizados se trabaj
utilizando el programa de anlisis de datos cualitativos Weft QDA, con el cual se realiz
anlisis de contenido de las transcripciones de ambos encuentros. Se utilizaron categoras de
anlisis previamente establecidas y se agregaron otras emergentes, surgidas de la
conversacin entre las personas participantes.
Los datos recogidos en la aplicacin del Cuestionario de Competencias Evaluativas se
analizaron con el programa PASW Statistics 18 (SPSS), realizando las siguientes pruebas:
- Anlisis de fiabilidad (Alpha de Cronbach de 0.959), el cul indic un alto nivel de
consistencia interna.
- Anlisis de Dimensionalidad, que arroj como resultados de la medida de adecuacin
muestral (KMO de .937) y de Esfericidad de Barlett (X2=11311.34, gl=1225, p<.001), por
tanto, se garantiza la reduccin dimensional, es decir, la matriz de datos se consideraba
apta para el anlisis factorial.
- Anlisis factorial, que determin la existencia de 10 factores diferentes, pero como el 94%
de los tems se incluyen en el mismo factor, se opt por la unidimensionalidad.
- Anlisis de normalidad de la muestra, que dio como resultado una significacin de 0.820
en la prueba de Kolmogorov Smirnov, lo que asegura la distribucin normal de los datos,
lo que indica que es posible aplicar pruebas paramtricas.
- Prueba T para muestras independientes y Prueba ANOVA de un factor, que mostraron la
existencia de diferencias significativas en algunos aspectos del cuestionario que se
describirn en el siguiente apartado.
978-84-695-8363-0
1643
Resultados
En relacin al primer objetivo, relativo a la identificacin de las competencias
evaluativas necesarias a desarrollar por el profesorado de educacin primaria, fue logrado al
determinar los componentes de las distintas dimensiones (tipos de competencias) del
instrumento diseado, proceso que cont con la colaboracin de maestros(as) y especialistas.
Respecto al segundo objetivo, consistente en disear un instrumento de autoevaluacin
para que el profesorado pueda revisar sus competencias evaluativas, fue alcanzado al culminar
el proceso de diseo y validacin del cuestionario.
En cuanto al tercer objetivo, destinado a hacer un diagnstico de las competencias
evaluativas del profesorado, se obtuvieron una serie de resultados, que se sintetizan a
continuacin:
- Las mujeres se autoevaluaron levemente ms alto en todos los tipos de competencia, pero
ambos grupos se valoran entre los niveles medio y alto de dominio.
- El grupo de educadores de menos de 26 aos se valor levemente ms bajo que el resto y,
en el otro extremo, el de ms de 65 aos, levemente ms alto que los dems.
- Las personas que se formaron en escuelas normales (antigua instituciones formadoras de
maestros en Chile) se evalan mejor al resto en casi todos los tipos de competencia.
- La realizacin o no de postttulos o postgrados, no implica diferencias estadsticamente
significativas entre los distintos grupos participantes.
- El profesorado con menos de cinco aos de experiencia valor su nivel de dominio como
ms bajo que los dems y los maestros con ms de 40 aos de experiencia se evaluaron con
un nivel ms alto de dominio en todos los tipos de competencia.
- En relacin a los aos de trabajo en la escuela actual, hay una leve tendencia a evaluarse
mejor en los profesores con ms de 11 aos de permanencia en la misma institucin.
- Respecto a la realizacin reciente de cursos de evaluacin, los maestros que han realizado
esta formacin se evalan con un mayor nivel de dominio que los que no lo han hecho.
- En cuanto al desempeo de cargos directivos o de coordinacin, los educadores que han
ejercido estas funciones se valoran levente ms bajo que los que no lo han hecho.
- No se observaron diferencias significativas atribuibles al tipo de dependencia de la escuela
(pblica o concertada), al ao de titulacin como maestro(a), o a la realizacin o no de
estudios de postgrado.
Respecto a los resultados obtenidos en la aplicacin del Cuestionario de Competencias
Evaluativas en relacin a cada tipo de competencia, en sntesis son:
- La correlacin entre los distintos tipos de competencia es significativa al nivel 0,01
(bilateral), especialmente entre las competencias participativa y personal.
978-84-695-8363-0
1644
Conclusiones
Este estudio se realiz teniendo como gua los tres objetivos fundamentales que se
plantearon al inicio del trabajo y que orientaron todo el proceso de investigacin. Mirando en
retrospectiva los propsitos planteados es posible afirmar que, en trminos generales, stos
fueron logrados satisfactoriamente y dieron forma a un trabajo de investigacin complejo,
pero muy desafiante, y a un proceso de aprendizaje arduo, pero sumamente gratificante.
Adems de los importantes aportes de la teora actualizada sobre evaluacin, la
consideracin de la opinin de los maestros y maestras antes de disear el instrumento,
constituye un aporte fundamental del estudio, pues la implicacin del profesorado contribuy
a que la identificacin de las competencias evaluativas deseables para los docentes se hiciese
apoyada en la realidad, en este caso, de los educadores(as) de Chile.
La investigacin ha podido contribuir a la reflexin sobre la enseanza,
particularmente en los aspectos evaluativos que la conforman. La idea de disear un
instrumento de autoevaluacin proviene del profundo convencimiento de que quienes mejor
pueden describir sus competencias son los mismos docentes.
El proceso de diseo del Cuestionario de Competencia Evaluativas permiti generar
un instrumento actualizado y cuya calidad fue avalada por las distintas personas que
participaron en el proceso de validacin y que ha podido ser utilizado como herramienta de
diagnstico en diversas escuelas de Chile.
978-84-695-8363-0
1645
Referencias
Agencia Nacional de Evaluacin de la Calidad y Acreditacin (2005). Libro Blanco, Titulo de
Grado en Magisterio. Madrid: ANECA.
Ahumada, P. (2005). La Evaluacin Autntica: un sistema para la obtencin de evidencias y
vivencias de los aprendizajes. Revista Perspectiva Educacional, 45.
Airasian P. y Gullickson, A. (1997). Teacher Self- Evaluation. En J. H. Stronge (Ed.,
Evaluating Teaching. A guide to current thinking and best practice. California: Sage
Publications.
Bisquerra, R. (2000). Mtodos de Investigacin Educativa. Gua Prctica. Barcelona: Ceac.
Cresswell, J. (2003). Research Design. Qualitative, Quantitative and Mixed Methods
Approaches. California: Sage Publications.
Danielson, C. (2007): Enhancing Professional Practice. A Framework for teaching.
Alexandria, Virgina: ASCD
Echeverra, B. (2005): Competencia de Accin Profesional de los profesionales de la
Orientacin. Madrid: Esic.
Fuentes-Medina, M. y Herrero, J. (1999). Evaluacin docente: Hacia una fundamentacin de
la autoevaluacin. Revista Electrnica Interuniversitaria de Formacin del
Profesorado,
2(1).
Disponible
en
lnea
en:
http://www3.uva.es/aufop/publica/actas/ix/32-fuentes.pdf
Kerlinger, F. (2002). Investigacin del Comportamiento: Tcnicas y Metodologa. Mxico:
Editorial Interamericana.
Mateo, J. (2000): La evaluacin educativa, su prctica y otras metforas. Barcelona: Editorial
Horsori.
Mateo, J. y Martnez; F (2008). Medicin y Evaluacin Educativa. Madrid: La Muralla.
978-84-695-8363-0
1646
Orozco, A., Ponce, B., ramos, G. (2007). Autoevaluacin de la Prctica Docente para
Profesores de Primaria. Mxico: Instituto Nacional para la Evaluacin de la
Educacin.
Perrenoud, P. (2004). Diez nuevas competencias para ensear. Invitacin al viaje. Gra:
Barcelona
Rosales, C. (2000). Evaluar es reflexionar sobre la enseanza. Madrid: Narcea.
Scriven, M. (1994). Duties of the teacher. Evaluation Checklists Project. Western Michigan
University.
Wiggins, G. (1990). The case for authentic assessment. Washington, DC: ERIC
Clearinghouse on Tests, Measurement, and Evaluation. (ERIC Document
Reproduction Service No. ED 328 611).
978-84-695-8363-0
1647
Resumen
En este estudio se evalan los efectos que produce la enseanza problematizada de la
astronoma diurna en los conocimientos de los futuros maestros de primaria. La mayora de
los estudiantes que acceden al grado de Magisterio no han cursado asignaturas de ciencias
en el bachillerato y buena parte de ellos, tienen actitudes negativas hacia el aprendizaje y la
enseanza de las ciencias. De manera general se piensa que plantearles el estudio de un tema
de ciencias en profundidad, podra causarles rechazo y aumentar todava ms sus actitudes
negativas hacia las ciencias, lo que adems llevara a que el nivel de conocimientos
adquiridos sea bajo. Sin embargo, los resultados que presentamos aqu demuestran que estos
alumnos alcanzan un alto nivel de conocimientos relacionados con el tema estudiado
(astronoma diurna), siendo este nivel independiente de su actitud inicial hacia las ciencias.
978-84-695-8363-0
1648
Introduccin
Se sabe que el dominio del contenido especfico influye en cmo ensea ciencias un
maestro de primaria, y disponemos de estudios que muestran que los maestros no se sienten
capacitados para impartir bien las asignaturas de ciencias (Caguiroglu, Capa-Aydin y
Woolfolk, 2012). No obstante, el nivel de aprendizaje que debe tratarse de conseguir sobre
temas especficos de ciencias, durante la formacin inicial de los maestros, es un asunto no
resuelto. Efectivamente, el dilema se presenta cuando se constata que la mayor parte de los
estudiantes de Magisterio acceden con una titulacin inicial que elude la especialidad de
ciencias del Bachillerato, y que, buena parte de ellos, tienen actitudes negativas hacia el
aprendizaje y la enseanza de las ciencias (exceptuando la biologa). Nos encontramos as con
futuros maestros de primaria que carecen de una formacin cientfica mnima, tienen una
actitud negativa hacia las ciencias, y su enseanza, y sin tiempo en el currculo para subsanar
esta situacin.
Esto ocurre, adems, en un momento en que la comisin de expertos de la unin
europea advierte del declinar del inters de los estudiantes europeos por cursar carreras de
ciencias identificndose la enseanza recibida como el origen de este declinar y propone un
cambio desde la enseanza por transmisin habitual hacia una enseanza de las ciencias
basada en la indagacin. Las propuestas del National Research Council (2012) son muy
similares.
Por nuestra parte, creemos que todos los maestros de primaria deben haber tenido
oportunidades para aprender con comprensin algunas de las grandes ideas de la ciencia, de
un modo coherente con la forma en que aspiramos a que enseen ciencias en su ejercicio
profesional. Difcilmente un maestro podr transmitir pasin por la ciencia si no ha tenido la
experiencia de vivir en propia carne el aprendizaje con comprensin de algunos temas de
ciencias.
As pues, nuestro estudio est orientado por las siguientes preguntas:
-
Para responder a esas preguntas, hemos diseado una asignatura de 60 horas lectivas
(la primera de las dos nicas asignaturas sobre enseanza y aprendizaje de las ciencias que
cursan los estudiantes en el Grado de Maestro en Educacin Primaria, en la Universidad de
Alicante) con dos grandes objetivos:
1.- Hacer reflexionar a los futuros maestros sobre sus actitudes iniciales hacia las
ciencias, posibles causas de las dificultades para aprender conocimientos cientficos y sobre
modelos de enseanza que podran mejorar la situacin.
Se trata de salir al paso de la creencia espontnea (compartida por los propios alumnos
y por buena parte de la sociedad) que achaca la existencia de actitudes negativas y de un
elevado fracaso en el aprendizaje de las ciencias a caractersticas propias de los alumnos y de
la materia: falta de capacidad (las ciencias son muy complejas!, slo algunos privilegiados
978-84-695-8363-0
1649
978-84-695-8363-0
1650
horas, es decir, se ha optado por profundidad frente a amplitud. Como se ver, el aprendizaje
pretendido es bastante exigente: buscamos una apropiacin funcional del modelo Sol/Tierra,
de manera que pueda ser utilizado para pensar sobre el mundo y darle sentido.
Mtodo
Hiptesis
La hiptesis que ha vertebrado, pues, nuestro trabajo es la siguiente:
La enseanza problematizada (por investigacin guiada) sobre los ciclos y simetras
del Sol y el modelo Sol/ Tierra -en el contexto de una asignatura diseada con las
caractersticas anteriores- produce un elevado nivel de aprendizaje en los futuros maestros, y,
simultneamente, unas actitudes muy positivas hacia las ciencias y su enseanza.
En esta comunicacin nos centraremos en el aprendizaje de los contenidos, y, de un
modo operativo, nuestra hiptesis afirma que:
H1.- La enseanza problematizada sobre los ciclos y simetras del Sol y el modelo Sol/
Tierra produce que la gran mayora de los futuros maestros adquieran un alto nivel de
aprendizaje, medido por la adquisicin de indicadores de comprensin elaborados por
expertos en dichos temas.
H2.- El nivel de aprendizaje alcanzado es independiente de las actitudes iniciales hacia
la ciencia y su enseanza.
Diseo
La enseanza se ha llevado a cabo durante dos aos, por dos profesores y a dos
grupos, cada uno de los aos, de alumnos de 2 curso del Grado de Maestro en Educacin
Primaria en la Facultad de Educacin de la Universidad de Alicante. Dado que no es posible
el muestreo al azar para constituir los grupos de alumnos, se han elegido de manera que
fueran lo ms homogneos posibles desde el punto de vista acadmico. Para ello, se ha tenido
en cuenta que la eleccin de grupo y horario por los alumnos se hace, en el momento de la
matriculacin, a partir de la nota media del curso anterior. En cada ao se han elegido dos
grupos que tenan el mismo horario y que se completaron en las mismas fechas del perodo de
matriculacin. Los dos profesores (A y B) se asignaron al azar a cada uno de los grupos cada
ao (1 y 2). Ambos profesores tenan amplia experiencia en enseanza problematizada de las
ciencias y dominio de los temas, emplearon las mismas secuencias de enseanza, el mismo
sistema de evaluacin y el mismo nmero de horas en cada tema. En las primeras clases se
pasaron cuestionarios para obtener informacin sobre la titulacin de acceso al Grado de
Maestro y sobre las actitudes hacia las ciencias y su enseanza.
978-84-695-8363-0
1651
Tabla 1
Denominacin, nmero de alumnos y titulacin de acceso de los grupos
Grupo
Profesor
Ao
Ciencias
frecuencia (%)
Letras
frecuencia (%)
Mixtas
frecuencia (%)
A1
2011-12
53
8 (15%)
9 (17%)
36 (68%)
B1
2011-12
51
12 (23%)
12 (24%)
27 (53%)
A2
2012-13
57
9 (16%)
10 (17%)
38 (67%)
B2
2012-13
54
8 (15%)
11 (20%)
35 (65%)
978-84-695-8363-0
Figura 1
1652
978-84-695-8363-0
1653
Figura 1 (continuacin)
La valoracin de las respuestas de los alumnos a las pruebas ha sido realizada con una
plantilla adaptada a los indicadores de comprensin, por dos investigadores (distintos de los
profesores implicados, y con dominio de los temas) que han utilizado la siguiente escala de
cuatro niveles para cada uno de los indicadores: 0 (no sabe o presenta errores fundamentales);
1 (sabe, con algunas deficiencias; tiene algunos errores en explicaciones no fundamentales,
pero no presenta errores importantes); 2 (sabe, casi sin errores; muestra un conocimiento muy
alto de la materia, pero presenta algunos errores menores) y 3 (sabe perfectamente). Eligieron
5 pruebas que valoraron, por separado, con la plantilla y pusieron en comn sus valoraciones,
clarificando el origen de sus discrepancias hasta llegar a un acuerdo. Repitieron el mismo
procedimiento con 10 pruebas ms, hasta conseguir un grado de coincidencia mayor del 90 %.
A partir de ah, uno solo de los investigadores valor el resto del grupo.
Para los anlisis de datos se han usado la hoja de clculo Excel y el programa de
estadstica SPSS.
Resultados
Slo mostramos los resultados globales obtenidos por los alumnos en las pruebas
formales realizadas al finalizar cada tema (tablas 2 y 3). En las tablas 5 y 6 se muestran los
978-84-695-8363-0
1654
mismos resultados, pero separados en funcin de la actitud inicial hacia las ciencias de los
alumnos. En la tabla 4 se muestran los resultados de los pretest y postest.
Tabla 2
Aprendizaje logrado por los futuros maestros sobre los ciclos y simetras del Sol, por profesor (A/B) y
por ao (1/2)
Curso 2011-12
Grupo
Grupo
Comprende los ciclos y simetras del Sol de un modo
A1*
B1
funcional? (Sabe orientarse temporal y espacialmente con
(n=57)
(n=60)
ellos?)
%
%
60
32
No
20
25
S, con alguna deficiencia
10
32
S, casi sin errores
10
11
S, perfectamente
* Se encontraron diferencias significativas entre los grupos (
Curso 2012-13
Grupo Grupo
A2
B2
(n=58) (n=61)
%
%
38
33
17
20
22
26
22
21
Global
(n=236)
%
40
20
23
17
60
eliminar este grupo los otros tres grupos no muestran diferencias significativas entre s (
= 4.505; p = 0.6087)
Tabla 3
Aprendizaje logrado por los futuros maestros sobre el modelo Sol-Tierra por profesor y por ao
Curso 2011-12
Comprende el modelo Sol/Tierra de un modo funcional?
(Sabe colocar un punto en el planeta a partir de datos
observables del movimiento del Sol en ese lugar y viceversa?;
Utiliza el modelo para deducir y comparar cmo se ver el Sol
en distintos lugares del planeta?;..)
No
S, con alguna deficiencia
S, casi sin errores
S, perfectamente
* Se encontraron diferencias significativas entre los grupos (
Curso 2012-13
Grupo
A1
(n=52)
%
Grupo
B1
(n=53)
%
Grupo
A2*
(n=58)
%
Grupo
B2
(n=58)
%
Global
(n=221)
%
38
25
23
14
42
34
9
15
14
43
17
26
27
38
21
14
30
35
18
17
70
eliminar este grupo los otros tres grupos no muestran diferencias significativas entre s (
= 6.374; p = 0.3826)
Tabla 4
Comparacin de conocimientos sobre los ciclos y simetras del Sol antes y despus de la instruccin,
mediante cuestionario en lenguaje no tcnico
alumnos
Curso 2012-13*
A2 (n=51)
%
pretest postest
100
43
No sabe
0
14
Sabe, con alguna deficiencia
0
29
Sabe, casi sin errores
0
14
Sabe, perfectamente
B2 (n=61)
%
pretest postest
100
34
0
16
0
25
0
25
Global (n=112)
%
pretest
100
0
0
0
= 2.59; p = 0.4593)
postest
38
15
27
20
978-84-695-8363-0
1655
Tabla 5
Aprendizaje logrado por los maestros en formacin sobre los ciclos y simetras del Sol en funcin de
su actitud inicial hacia las ciencias
Actitud inicial hacia las ciencias*
Negativa
Neutra
Positiva
Comprende los ciclos y simetras del Sol de un modo funcional?
(n = 111 )
(n = 48)
(n = 54)
(Sabe orientarse temporal y espacialmente con ellos?)
%
%
%
43
50
31
No
20
17
20
S, con alguna deficiencia
21
23
26
S, casi sin errores
16
10
22
S, perfectamente
*El test 2 no mostr diferencias significativas entre estos grupos (ni entre las comparaciones dos a dos ni en la
comparacin entre todos los grupos; p >0.21 en todos los casos)
Tabla 6
Aprendizaje logrado por los maestros en formacin sobre el modelo Sol-Tierra en funcin de su
actitud inicial hacia las ciencias
Actitud inicial hacia las ciencias*
Comprende el modelo Sol/Tierra de un modo funcional? (Sabe
colocar un punto en el planeta a partir de datos observables del
movimiento del Sol en ese lugar y viceversa?; Utiliza el modelo
para deducir y comparar cmo se ver el Sol en distintos lugares
del planeta?;..)
No
S, con alguna deficiencia
S, casi sin errores
S, perfectamente
Negativa
(n = 103)
%
Neutra
(n = 45)
%
Positiva
(n = 51)
%
31
32
22
15
31
33
18
18
24
43
10
24
*El test 2 no mostr diferencias significativas entre estos grupos (ni entre las comparaciones dos a dos ni en la
comparacin entre todos los grupos; p >0.1 en todos los casos)
Discusin y conclusiones
Los resultados muestran que, mediante la enseanza problematizada en el contexto de
la asignatura con las caractersticas expresadas en la introduccin, es posible conseguir un alto
nivel de aprendizaje en la gran mayora de los maestros en formacin: aproximadamente un
70 % de los alumnos consigue los indicadores de comprensin, antes de realizar el examen
final, y en torno al 35 % del total lo hace a un nivel excelente (vase la 5 y 6 filas de las
tablas 2 y 3; este porcentaje se acerca al 50 % en la prueba postest). No existen diferencias
significativas entre los niveles de aprendizaje conseguido en diferentes aos ni por profesores
distintos, lo que apunta claramente al modelo de enseanza problematizada como factor clave
en dichos resultados. Ms interesante an, desde el punto de vista de la formacin de futuros
maestros, es que la instruccin desarrollada es capaz de superar las actitudes iniciales
negativas de muchos alumnos: no existen diferencias significativas en el nivel de aprendizaje
alcanzado por alumnos con actitudes iniciales diferentes (tabla 5 y 6). Como pretendamos, la
asignatura contribuye a superar la baja autoestima o sensacin de incapacidad para aprender
ciencias que una buena parte de los futuros maestros manifiestan al inicio del curso.
978-84-695-8363-0
1656
Referencias
Becerra-Labra, C., Gras-Mart, A. y Martnez Torregrosa, J. (2012). Effects of a problembased structure of physics contents on conceptual learning and the ability to Solve
problems. International Journal of Science Education, 34(8), 1235-1253.
Caguiroglu, J., Capa-Aydin, Y. y Woolfolk Hoy, A. (2012). Science teaching efficacy beliefs.
En B. J. Fraser, K. G. Tobin y C. J. McRobbie (Eds.), Second International Handbook
of Science Education Vol.1 (pp. 449-461). Dordretch: Springer.
Harlen, W. (2010). Principles and big ideas of science education. Herts: Association for
Science Education.
Martnez Torregrosa, J., Osuna Garca, L. y Martnez Sebastin, B. (2011a). Iniciacin a la
astronoma diurna (1). Disponible en: http://rua.ua.es/dspace/handle/10045/19065
Martnez Torregrosa, J., Osuna Garca, L. y Martnez Sebastin, B. (2011b). Iniciacin a la
astronoma diurna (2). Disponible en: http://rua.ua.es/dspace/handle/10045/21680
Martnez Torregrosa, J., Osuna Garca, L. y Martnez Sebastin, B. (2011c). Iniciacin a la
astronoma
diurna
(2).
Disponible
en:
http://rua.ua.es/dspace/bitstream/10045/21680/6/5.%20Indicadores_de_comprension%2
0Astronomia.pdf
National Research Council. (2012). A Framework for K-12 Science Education: Practices,
Crosscutting Concepts, and Core Ideas. Committee on a Conceptual Framework for
New K-12 Science Education Standards. Board on Science Education, Division of
Behavioral and Social Sciences and Education. Washington: The National Academies
Press.
Verd Carbonell, R. (2004). La estructura problematizada de los temas y cursos de Fsica y
Qumica como instrumento de mejora de su enseanza y aprendizaje. Tesis Doctoral.
Universidad de Valencia.
978-84-695-8363-0
1657
Resumen
Con este trabajo pretendemos poner de manifiesto la importancia que conlleva implementar
procesos de diagnstico de necesidades desde una perspectiva de investigacin-accin cara a
establecer una priorizacin de las demandas recogidas desde la puesta en marcha de
procesos de triangulacin mltiple. Consolidar esta metodologa de investigacin
intervencin ha posibilitado en el estudio de casos que planteamos, el diseo contextualizado
de un proyecto de intervencin de huerto ecolgico para personas con discapacidad sensorial
en equipamientos ambientales. Los resultados obtenidos con la triangulacin han favorecido
la agrupacin y distribucin de necesidades en grandes dimensiones por el grado de
concordancia establecido, que posteriormente ha devenido en la estructuracin del citado
proyecto de intervencin desde una perspectiva coordinada y contextualizada a la demanda.
Descriptores:
ambientales.
Evaluacin
de
necesidades,
triangulacin
analtica,
equipamientos
Abstract
In this paper we try to show the importance involved implement needs assessment processes
from an action research perspective in order to establish prioritization of claims collected
from the implementation of multiple triangulation processes. Consolidating this researchintervention methodology has enabled in the study of cases that we submitted, the
contextualized planning of a project of intervention about ecologist orchard for people with
sensory disabilities in environmental equipment. The results obtained with the triangulation
has favored the clustering and distribution of needs in large dimensions by the degree of
agreement established, which has subsequently become in structuring the intervention project
cited from a coordinated perspective and contextualized to demand.
Introduccin
Para Erazo (2011) la triangulacin constituye en la investigacin cualitativa uno de los
requisitos bsicos de credibilidad de los hallazgos obtenidos. Consiste en documentar la
informacin y contrastarla segn diferentes puntos de vista, de ah que se hable de
triangulacin de tcnicas, de agentes, de tiempos, e incluso de triangulacin metodolgica. En
978-84-695-8363-0
1658
Mtodo
Para la priorizacin de anlisis de necesidades en equipamientos ambientales mediante
estrategias de triangulacin analtica proponemos un modelo procedimental estructurado en
diversas etapas. En su desarrollo partiremos de una primera aproximacin bsica que hizo
Gracia (2011). El dicho trabajo la autora propuso un proceso de triangulacin para el anlisis
y priorizacin de necesidades que fue abordado de manera bsica y en el que se expusieron
conclusiones, que aunque legtimas, hemos considerado que se podran mejorar con el modelo
978-84-695-8363-0
1659
978-84-695-8363-0
1660
Tabla1
Mapa de presencias vs ausencias de las necesidades en los diferentes niveles de triangulacin
TRIANGULACIN N1: TCNICAS
NECESIDAD
N1
N2
N3
N4
N5
N6
N7
N8
N9
N10
N11
N12
N13
N14
N15
N16
N17
N18
N19
N20
N21
DOC
X
X
FOT
X
X
X
X
DOCinternos
X
X
X
X
X
X
X
X
X
X
X
X
X
X
X
X
X
X
X
X
X
X
X
X
X
Fuente: Gracia, P (2011). Ve escuchando, escucha viendo. El huerto de los sentidos. Trabajo Fin de Mster
(Indita) del Mster de Educador-a Ambiental. Universidad de Granada. Granada. Espaa.
Leyenda:
DOC:
Documentos
internos
y
otros
documentos/FOT:
Fotografas/ENT:
Entrevistas/FAM:Familias/PEE: Profesionales de Educacin Especial/PEA: Profesionales de Educacin
Ambiental.
978-84-695-8363-0
1661
Tabla 2
Mapa de densidad de las necesidades en los diferentes niveles de triangulacin, as como su ndice y
NECESIDAD
N1
N2
N3
N4
N5
N6
N7
N8
N9
N10
N11
N12
N13
N14
N15
N16
N17
N18
N19
N20
N21
necesidades
por nivel de
triangulacin
DOC
16,6%
16,6%
PEA
16,6%
16,6%
50%
33,3%
50%
50%
16,6%
50%
33,3%
16,6%
2
10
11
16,6%
9
IDen %.
33,3%
66,6%
33,3%
33.3%
16,5%
83,6%
16,5%
33,3%
33,3%
33,3%
16,6%
16,6%
50%
33,3%
50%
50%
16,6%
50%
33%
16,6%
16,6%
IDen.
0.33
0.66
0.33
0.33
0.16
0.83
0.16
0.33
0.33
0.33
0.16
0.16
0.50
0.33
0.5
0.5
0.16
0.5
0.33
0.16
0.16
978-84-695-8363-0
1662
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
21
Poner en marcha un proyecto de EA sobre huertos educativos ecolgicos para personas con
discapacidad visual y/o auditiva para favorecer su integracin y la adquisicin de
conocimientos.
Llevar a cabo un proyecto de EA sobre huertos educativos ecolgicos destinado a toda la
poblacin para sensibilizarlos con este colectivo.
Un proyecto EA sobre huerto educativo ecolgico en el centro.
Crear un proyecto sobre huertos ecolgicos para inculcar a los participantes una idea
general de la agricultura ecolgica.
Aprovechar los espacios disponibles con la creacin de un huerto educativo ecolgico.
Adaptar determinados espacios del centro con la sealizacin adecuada para favorecer el
movimiento de forma autnoma de los/as posibles visitantes con discapacidad visual.
Que los participantes conozcan las diferencias entre productos ecolgicos y no ecolgicos.
Adaptar el proyecto pedaggico a las personas con discapacidad visual o auditiva.
Fomentar el uso de la agricultura ecolgica entre los/as participantes con actividades,
sesiones informativas, etc.
Formacin y conocimientos adecuados por parte del equipo pedaggico del centro en
materia de discapacidad visual y auditiva, para, as dar una respuesta adecuada a sus
necesidades.
Dar respuesta a las necesidades especficas de apoyo educativo (LOE, 2006) de estos
colectivos desde el proyecto pedaggico del centro.
Adaptar los materiales didcticos, como son cuadernillos, guas, etc. al braille, para
personas ciegas, o aumentar el tamao de las letras, para personas con baja visin.
Llevar a cabo actividades paralelas al proyecto, pero ntimamente relacionadas con el
mismo.
Ofrecer sesiones informativas, explicaciones, etc. previas sobre la agricultura ecolgica.
Que la estancia en el centro para la participacin en el proyecto no supere los 3-4 das.
Que los grupos que asistan sean heterogneos para la integracin de las personas con
discapacidad auditiva-visual.
Planificacin meticulosa y detallada del proyecto.
Que el proyecto se realice en los meses de primavera.
Que el precio de la estancia no supere los 150 euros aproximadamente.
Usar materiales adecuados para las tareas relacionadas con el huerto.
Realizar una buena campaa de difusin del proyecto.
Grupo de
prioridad:
1:baja;
2:moderada
y 3: alta
2
3
2
2
1
3
1
2
2
2
1
1
2
2
3
3
1
3
2
1
1
978-84-695-8363-0
1663
Necesidades que
con conforman el
conglomerado
Medias de ndice
de densidad
%prome dio
del ndice de
densidad
4,5,7,10,11,12
.2167
21.67%
1,8,9,14,17,19,20
.2814
28.14%
2,3,6,13,15,16,18,21
.4763
47.63%
CONGLOMERADO 2
CONGLOMERADO 3
978-84-695-8363-0
1664
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
21
Discusin
Como se desprende del coeficiente de concordancia obtenido ( = .603) puede
afirmarse que se ha establecido un acuerdo consistente, que segn la clasificacin de Landis y
Koch (1977) puede considerarse como moderado. Aun as, el proceso de concordancia siguen
incompleto si no verificamos el rechazo de la hiptesis nula Ho: = 0 con T = / N
(0,1). En este sentido, podemos observar como hemos obtenido un error tpico asinttico (
978-84-695-8363-0
1665
Referencias
lvarez Rojo, V. y otros (2002). Diseo y evaluacin de programas. Madrid: EOS.
Barusch, A., Gringeri, C., & George, M. (2011). Rigor in qualitative social work research: A
review of strategies used in published articles National Association of Social Workers
(NASW). Social Work Research, 35 (1), 11-19.
Coimbra, C. (1999). A credibilidade da investigaao cientifica de naturalez qualitativa.
Questoes relativa sua fidelidade e validade. Revista Portuguesa de Pedagoga, 33,
89-116.
Creswell, J.W. (2005). Research Design: Qualitative, Quantitative and Mixed Methods
Approaches (2nd edition). Thounsand Oaks. Sage.
Denzin, N. K. (2010). Moments, mixed methods, and paradigm dialogs. Qualitative Inquiry,
16(6), 419-427.
Erazo, M.S: (2011). Rigor cientfico en las prcticas de investigacin cualitativa. Ciencia,
Docencia y Tecnologa, 42(22), 107-137.
Gracia, P. (2011). Ve escuchando, escucha viendo. El huerto de los sentidos. TFM del Mster
de Educador/a Ambiental (indito). Universidad de Granada. Granada. Espaa.
Miles, M. y Huberman, A.M. (1994). Data management and analysis methods. En Denzin,
N.K. & Lincoln, Y.S. (Eds.), Handbook of cualitative research, 429-444. Londres:
Sage Publication.
Moral, C. (2006). Criterios de calidad de la investigacin cualitativa. Revista de Investigacin
Educativa, 24(1), 147-166.
978-84-695-8363-0
1666
978-84-695-8363-0
1667
Resumen
Durante el ao 2010 se llev a cabo en Galicia un estudio60, cuyo inters se centr en
analizar detalladamente mltiples dimensiones de una realidad polidrica y compleja,
muestra del liderazgo y el empoderamiento femenino: las empresas lideradas por mujeres
universitarias. El objetivo de la comunicacin que se presenta es doble, por una parte,
analizar la formacin que poseen las empresarias en el momento de constituir su empresa y
sus necesidades de formacin para emprender y, por otra, presentar los resultados del
anlisis de necesidades formativas de esas empresas en el momento en que se realiz el
estudio. La metodologa es cuantitativa, recogiendo datos mediante un cuestionario
elaborado ad hoc por el equipo de investigacin. Obtener la muestra fue el principal
obstculo, ante la dificultad de identificar a priori la poblacin objeto de estudio. Se emple
una muestra de conveniencia obtenida a travs del muestreo en bola de nieve. Para alcanzar
nuestros objetivos, en primer lugar, identificamos las entidades que prestan servicios a
empresarias (fundaciones, asociaciones, etc.) y su intermediacin nos facilit referencias o
les hizo llegar, a las empresarias, el cuestionario a travs del correo electrnico para que
estas lo contestasen telemticamente. Este proceso dio como resultado el contacto con
aproximadamente setecientas veinte y cinco empresarias con estudios universitarios de las
que respondieron el cuestionario noventa y una. Como resultados hemos de destacar,
brevemente, que ms de la mitad de la muestra consultada no recibi formacin para crear
su empresa, que la formacin recibida para emprender fue puntual y poco estructurada y que
los aspectos considerados ms necesarios para los posibles planes de formacin de las
empresas seran: formacin en el uso de tecnologas, reciclaje profesional, transferencia de
conocimientos y aprendizaje de idiomas. Mientras que los menos demandados seran la
mentora y el coaching de equipos.
Financiado por el Fondo Social Europeo y el Servicio Gallego de Promocin de la Igualdad del Hombre y la
Mujer integrado en la Secretara General de Igualdad de la Xunta de Galicia.
978-84-695-8363-0
1668
on the other, present the results of the analysis of training needs of these firms at the moment
in which the study was conducted. The methodology is quantitative, collecting data through a
questionnaire elaborated ad hoc by the research team. Get the sample was the main obstacle
to the difficulty of identifying a priori the study population. A convenience sample obtained
through the snowball sampling was used. In order to achieve our goals, objectives, firstly, to
identify entities provide services to entrepreneurs (foundations, associations, etc.) and then
their intermediation provided us references or sent them to women entrepreneurs, the
questionnaire via e-mail so these answer it electronically. This process resulted in contact
with about seven hundred and twenty-five entrepreneurs with university studies that answered
the questionnaire ninety one. As results highlight, briefly, that more than half of the sample
received no training consulted to create your company, the training received to undertake
was timely and little structured and that the aspects considered most necessary for formation
of business plans would be: training in the use of technologies, retraining, transfer of
knowledge and language learning. While the defendants would be less mentoring and
coaching.
Texto
La desigualdad de gnero es una construccin social y una asignacin de roles en
funcin del sexo. Esta diferencia biolgica entre sexos se utiliza como justificacin natural
especialmente de la divisin sexual del trabajo (Moller, 1996).
Los hombres y las mujeres no solo estn situados en la sociedad de manera diferente,
sino tambin desigual. En concreto, las mujeres tienen menos recursos materiales, menor
estatus social, poder y oportunidades para la autorrealizacin que los hombres de idntica
posicin social, ya se base esa posicin en la clase, la raza, la ocupacin, la etnicidad, la
religin, la educacin, la nacionalidad o cualquier otro factor socialmente relevante (Torns,
1995).
Las desigualdades entre mujeres y hombres en la sociedad se estudian siempre desde
un enfoque multidimensional que, en el caso que nos ocupa, estara referido
fundamentalmente a dos dimensiones: por una parte, las oportunidades de acceder a los
puestos directivos y la formacin que se requiere para poder liderar una empresa y, por otra
parte, las oportunidades de desarrollo y promocin profesional y la formacin para el
desempeo de la ocupacin a la que las y los empleadas/os tienen acceso o la que se puede
organizar dentro de la empresa para un mayor desarrollo de la misma, una mayor promocin
de las empleadas/os y mayor productividad de la plantilla con menor costo.
Varios estudios (Pisa, 2004; Gemes, 2006, Otiz et al., 2008) destacan que las mujeres
empresarias suelen demandar de las instituciones fundamentalmente tres tipos de apoyos:
recursos financieros suplementarios, formacin y asesoramiento. Tambin es necesario
considerar las caractersticas de las empresas dirigidas por mujeres para brindar un apoyo ms
adecuado a las mismas: son de pequeo tamao (con pocos o ningn empleado), requieren
poca inversin inicial, adolecen de falta de gestin empresarial y su mbito de actuacin y
negocio suele ser el mercado local y/o nacional.
978-84-695-8363-0
1669
978-84-695-8363-0
1670
Tabla 1
Categoras de respuesta de las variables objeto de investigacin
Denominacin de la variable
Categoras de respuesta
Dime nsin 3. Datos sobre la formacin en la empresa y la formacin de la empresaria
Reconocimiento de la formacin recibida para crear la empresa
Si, no.
Formacin recibida, entidad formadora y duracin de la misma
Pregunta abierta de respuesta libre.
Existencia de un estudio especfico de necesidades de formacin
Si, non.
Necesidade/s de formacin detectada/s
Pregunta abierta de respuesta libre.
Grado de necesidades de formacin de la empresa en distintas Ninguna, poca, alguna, bastante,
temticas (uso de tecnologas, idiomas, innovacin, transferencia de mucha.
conocimientos,
coaching/mentoring,
formacin
inicial
de
empleados/as, reciclaje profesional, otros)
Otras necesidades de formacin
Pregunta abierta de respuesta libre.
Las entrevistas realizadas presentaban preguntas relativas a las mismas variables que
incorporaba el cuestionario con el objetivo de verificar y complementar la informacin
contenida en los mismos. A modo de ejemplo algunas de las cuestiones formuladas fueron las
siguientes:
- Qu ayudas externas hay para apoyar a las mujeres empresarias? Son suficientes?
- Se dispone de tiempo y recursos suficientes para formarse adecuadamente para desempear
puestos de liderazgo y gestin de empresas?
- La formacin de las empresarias gallegas es buena y adecuada para el mundo empresarial o
hay algunos factores que considere deberan ser ms trabajados?
El anlisis de la informacin recogida nos aporta informacin en relacin a las
siguientes variables: reconocimiento de la formacin recibida para crear la empresa;
formacin recibida, entidad formadora y duracin de la misma; existencia de un estudio
especfico de necesidades de formacin, necesidades de formacin de la empresa en relacin
con algunos indicadores especficos.
Ms de la mitad de la muestra consultada (60,5%) no recibi formacin para crear la
empresa y del 38,4% (grfico 1) que si reconoce haber recibido alguna formacin para este fin
es de destacar la brevedad de la misma, en la mayora de los casos.
978-84-695-8363-0
1671
Adems, esta formacin habra sido impartida por distintas entidades e iniciativas
entre las que podemos destacar, aunque sin nimo de ser exhaustivas, las siguientes:
-
Curso de formacin e insercin profesional del Plan FIP de 100 horas (E96)
978-84-695-8363-0
1672
Por ltimo se les pregunt a las empresarias por el grado de necesidad que tienen, en
las empresas que ellas dirigen, en algunos dominios especficos que se tienen destacado como
elementos esenciales detectados en empresas de calidad del mercado laboral actual como son
el uso de tecnologas, los idiomas, la innovacin, la transferencia de conocimientos, las
acciones de tutorizacin en la empresa (coaching/mentoring), la formacin inicial de los
empleados/as y las necesidades de reciclaje profesional o de formacin permanente.
Las empresarias consultadas tal como se recoge en el grfico 2, sealan que los tres
aspectos, de los reseados, ms necesarios para elaborar planes de formacin en sus empresas
seran la formacin en el uso de tecnologas (el 63,9%) las considera muy necesarias); el
reciclaje profesional (60,5%) y las actividades de formacin relacionadas con la innovacin
de la empresa (60,4% indica ser necesaria bastante o mucha formacin en este aspecto).
120
mucho
100
bastante
80
algo
60
poco
40
nada
20
ns/nc
O tra fo r m a c i n
R e c ic la je
p ro f e s io n a l
F o rm a c i n in ic ia l
e m p le a d o s /a s
c o a c h in g /m e n to r in g
T r a n s fe re n c ia
In n o v a c i n
Id io m a s
U s a r te c n o lo g a
978-84-695-8363-0
1673
Conclusiones
Es necesario, en lo que respecta a la formacin, potenciar la realizacin de estudios de
necesidades en las empresas dirigidas por mujeres y apoyar los planes de formacin en las
empresas sobre todo en temas relacionados con la gestin empresarial, las tecnologas de la
informacin y la comunicacin, los idiomas y la bsqueda de redes de contactos en el mundo
empresarial y de los negocios en los diferentes sectores productivos.
Sera necesaria una mayor concienciacin de las Universidades para mejorar el apoyo
que estas prestan en el asesoramiento y formacin para la creacin de empresas gestionadas
por mujeres sobre todo en las de base tecnolgica y las que precisan de internacionalizacin
de la investigacin aplicada. Sirva de ejemplo la labor llevada a cabo por varias universidades
espaolas integradas en la red Women Emprende que con escasos recursos econmicos
desarrolla una apuesta decidida por el emprendimiento femenino.
Sera, as mismo, muy positivo trabajar en la colaboracin entre las empresarias de los
distintos sectores para favorecer las sinergias que se dan entre sus empresas y adems
favorecer el asociacionismo ya sea intersectorial o de la zona geogrfica en la que se
circunscribe la empresa. Las redes de colaboracin facilitaran, en el tema que nos ocupa, la
localizacin y mejor difusin de ayudas y subvenciones, aglutinara formacin especfica para
sectores empresariales concretos disminuyendo sus costes, mejorara la comercializacin y la
transferencia de conocimientos y canalizara las demandas a las administraciones competentes
ejerciendo mayor fuerza y peso que si todo lo hace cada una de las empresarias por separado.
En definitiva, la sociedad, en general, y el mundo empresarial, en particular, deben
asumir la necesidad de crear polticas de formacin que sean capaces de disear una oferta
formativa adecuada a las necesidades cambiantes del mercado laboral. Para conseguir este
propsito ser necesario realizar un anlisis sistemtico de las necesidades que indiquen qu
clase de formacin se debe poner en prctica. Por ello, el proceso de deteccin y evaluacin
de necesidades es fundamental para el diseo de una oferta formativa basada en la demanda.
Referencias
Biernacki, P. y Waldorf, D. (1981). Snowball sampling: problems and techniques of chain
referral sampling. Sociological Methods and Research, 10(2), 141-163.
Moller, S. (1996). Desigualdad de gnero y diferencias culturales. En C. Castells (Coord.),
Perspectiva feminista en teora poltica (pp. 185-206). Barcelona: Paids.
Otiz, C., Duque, Y. V. y Camargo, D. (2008). Una revisin a la investigacin en
emprendimiento femenino. Revista Facultad Ciencia Econmica, XVI(1), 85-104.
Parellada, M. et al. (1999). La formacin continua en las empresas y el papel de las
Universidades. Madrid: Civitas Ediciones.
PISA (2004). Estudio sobre las necesidades de las mujeres empresarias en Gijn. Gijn:
Ayuntamiento.
978-84-695-8363-0
1674
Ramos, A. (2005). Mujeres directivas: un valor en alza para las organizaciones laborales.
Cuadernos de Geografa, 78, 191-214.
Rodrguez, M. J. y Santos, F. J. (2008). La actividad emprendedora de las mujeres y el
proceso de creacin de empresas. Informacin Comercial Espaola, ICE: Revista de
Economa, 841, 117-134.
Torns, T. (1995). Mercado de trabajo y desigualdades de gnero. Cuaderno de Relaciones
Laborales, 6, 81-92.
978-84-695-8363-0
1675
Resumen
Esta comunicacin presenta el proyecto de investigacin titulado Las competencias
profesionales de carcter metodolgico en el grado de Pedagoga de la UB (REDICE122100-01 IP Torrado, M.) cuya finalidad es analizar el proceso de adquisicin de las
competencias profesionales de carcter metodolgico mediante el anlisis de las actividades
de aprendizaje programadas en cada una de las asignaturas metodolgicas (obligatorias y
optativas) del plan de estudios del Grado de Pedagoga de la Universidad de Barcelona. El
estudio ha intentado superar la fragmentacin del contenido por asignaturas y ha pretendido
tener una visin del conjunto de la formacin acadmica desde una perspectiva transversal
(por semestre y curso) y a la vez longitudinal. Se ha utilizado una metodologa de carcter
descriptivo en cinco fases integrando elementos cualitativos y cuantitativos y los diferentes
agentes implicados.
Introduccin
Uno de los principales retos que plantea el EEES en las aulas universitarias es el
cambio de concepcin del proceso de enseanza-aprendizaje basado en competencias, donde
978-84-695-8363-0
1676
los protagonistas, alumnado y profesorado, adoptan nuevos roles. El alumnado como agente
activo y protagonista de su propio aprendizaje y el profesorado como gua y orientador de su
trabajo. En este marco, el diseo curricular, las estrategias de enseanza-aprendizaje, la
evaluacin y los entornos de aprendizaje deberan orientarse hacia una adecuada adquisicin
de las competencias de los estudiantes para optimizar su futura integracin en el mundo
laboral.
978-84-695-8363-0
1677
978-84-695-8363-0
1678
que concurren de forma integrada en los sujetos a lo largo de toda la vida. Todo esto le exige,
en cuanto que competencia general, saber leer el proceso de la investigacin sobre tpicos de
inters profesional e interpretar sus resultados.
Pero, adems, la formacin en esta competencia es especialmente relevante por su
dimensin prctica y por el auge que ha tomado en estos momentos para una tarea
profesionalizada. El pedagogo/a ha de estar capacitado/a para detectar (diagnosticar)
necesidades de formacin en cualquier colectivo y en los diferentes contextos (educativo,
social, comunitario, empresarial) donde se desarrollan. A partir de estas necesidades, tambin
debe ser capaz de disear propuestas de accin (planes, proyectos, programas y acciones
formativas adaptadas a agentes y circunstancias concretas) a la vez que mostrar capacidades
para gestionarlos, implementarlos, seguirlos y evaluarlos.
Por lo tanto, el pedagogo/a es un profesional que aplica un saber fundamentado a
situaciones especficas de su prctica profesional. La investigacin educativa le aporta una
manera de operativizarlo, es una herramienta a su disposicin para hacerlo posible. Se podra
decir que el pedagogo/a es un profesional usuario de la investigacin educativa.
En el estudio efectuado por Patrn y Campos (2002), dirigido a analizar la
conceptualizacin sobre investigacin educativa por parte del alumnado universitario y sus
transformaciones a lo largo de su formacin acadmica, se afirma la conveniencia de dar
puntual atencin al conocimiento formal, relacionarlo con la prctica cotidiana y abordarlo en
sus diversos niveles epistemolgicos (descriptivo, explicativo y ejemplificativo) con el fin de
lograr estructuras lgico-conceptuales claras, encontrar un sentido a las actividades de clase y
estar en posibilidades de construir diseos de investigacin slidos.
En el plano curricular esto implica proveer condiciones para saber-qu, adems de
formar para saber-hacer. Pero, cmo? Estableciendo los conceptos fundamentales (la
fundamentacin terica de la investigacin educativa) y abordndolos explcitamente;
exigiendo al profesorado que los conozcan a fondo y los imparta utilizando un lenguaje
preciso, accesible y con analogas relevantes para el alumnado. Todo esto, adems, integrado
al diseo de la investigacin y en el estudio de procesos concretos.
La actual arquitectura del Plan de Estudios del Grado de Pedagoga de la UB sigue un
diseo competencial y si se analiza a partir de las diferentes materias que lo integran se
observa que en todas ellas hay competencias relacionadas directamente con el rea
metodolgica.
En la tabla 1 se presentan la secuencia curricular de todas las asignaturas
metodolgicas incluyendo la asignatura de Diagnstico y orientacin educativa por su
vinculacin indirecta al rea de mtodos. En el proyecto slo se consideran las asignaturas
con una implicacin total al rea y que se hayan podido cursar en los tres primeros aos. La
optativa de Redes sociales en educacin no se ha incluido.
978-84-695-8363-0
1679
Tabla 1
Distribucin de las asignaturas metodolgicas en el ttulo de Pedagoga de la UB
GRADO DE PEDAGOGA ASIGNATURAS METODOLGICAS
Tipo de
asignatura
Obligatorias
Optativas
1er Curso
2 Curso
Teora y prctica de la
investigacin educativa
(6 crditos)
No hay oferta en el
ttulo
Estadstica aplicada a la
educacin (6 crditos)
3er Curso
4 curso
Diagnstico y
orientacin educativa
(6 crditos)
Instrumentos y estrategias
de recogida de informacin
(6 crditos)
Resolucin de problemas a travs de investigacin educativa (3
crditos 3er S)
Informtica aplicada a la investigacin educativa (3 crditos-4 S)
Redes sociales en educacin (3 crditos 5 S-7S)
Mtodo
El proyecto de investigacin tiene la finalidad de analizar el proceso de adquisicin de
las competencias profesionales de carcter metodolgico a lo largo de los cuatro aos de
formacin en el ttulo de Pedagoga, tanto desde la perspectiva docente como discente. El
estudio ha intentado superar la fragmentacin del contenido por asignaturas y ha pretendido
tener una visin del conjunto de todas las asignaturas (obligatorias y optativas) desde una
perspectiva transversal (por semestre y curso) y a la vez longitudinal. Se ha utilizado una
metodologa de carcter descriptivo en cuatro fases integrando elementos cualitativos y
cuantitativos para poder valorar hasta qu punto las actividades de aprendizaje que se realizan
en el s de las diversas asignaturas han contribuido a la adquisicin de las competencias
profesionales de carcter metodolgico.
Tabla 2
Fases de la investigacin
Fases de la investigacin
1. Anlisis documental de las
competencias en formacin
metodolgica.
2. Identificacin de las actividades de
aprendizaje en cada una de las
asignaturas.
3. Intercambio de experiencias y
consensuar la complejidad y
secuencia de las actividades de
aprendizaje.
4. Identificacin de actividades
bsicas en la adquisicin de
competencias desde la visin del
alumnado.
Descripcin
Hacer un anlisis de contenido sobre cmo
se ha formalizado la concrecin de las
competencias profesionales en objetivos de
aprendizaje.
Recoger de manera sistemtica la diversidad
de actividades que se hacen dentro y fuera
del aula.
Grupos de trabajo.
978-84-695-8363-0
1680
Resultados
Los resultados que se presentan integran la visin del profesorado y del alumnado en
cuanto al anlisis de las actividades de aprendizaje de las asignaturas metodolgicas del ttulo.
La informacin cualitativa obtenida por los docentes implicados en los equipos
docentes ha permitido identificar un total de 31 actividades de aprendizaje distribuidas de
forma desigual por asignatura en funcin del nmero de crditos y horas semanales de
docencia (cuatro horas en las obligatorias y dos en las optativas), as como su relacin con los
objetivos de aprendizaje definidos en cada una de ellas. Este acercamiento permite tener un
mapa real de qu y cmo se trabaja en las diversas actividades de aprendizaje de una manera
contextualizada.
Las actividades resultantes se han analizado utilizando varios criterios:
a) Relacin con el contenido metodolgico. En todas las asignaturas aparecen una serie de
actividades de aprendizaje comunes y propias del contenido metodolgico: anlisis de
artculos de investigacin, bsqueda bibliogrfica, presentacin de investigaciones por
parte de expertos, elaboracin de instrumentos de recogida de informacin, analizar
informacin, disear una investigacin. Aparecen tambin, actividades propias que
refuerzan el trabajo en grupo dentro y fuera del aula, actividades de repaso y de reflexin
personal y grupal.
b) En funcin del nmero de estudiantes implicados. Este anlisis ha permitido constatar una
predominancia de actividades de aprendizaje que tienen lugar en el aula y que implica la
participacin de todo el grupo clase. Tienen muy poca presencia, en general, las
actividades de carcter individual.
c) En cuanto al tiempo requerido para realizar la actividad (tiempo inmediato, a medio plazo
dos semanas mximo fuera del aula- y a largo plazo ms de dos semanas fuera del aula.
Los resultados son coherentes con el nmero de estudiantes implicados. Las actividades a
largo plazo son casi siempre en grupo y fuera del aula.
d) Niveles de aprendizaje. Los niveles de aprendizaje conseguidos en las actividades segn la
taxonoma de Bloom (Anderson y Krathwohl, 2001) se muestran en el grfico. Existe un
amplio abanico de tareas que van desde los niveles bsicos de aprendizaje como es la
memorizacin hasta los niveles complejos (sntesis y evaluacin). Sin embargo la mayora
de actividades son de carcter aplicado.
Grfico 1. Porcentaje relativo del nivel de aprendizaje que requieren las actividades
978-84-695-8363-0
1681
Actividades de
aprendizaje (**)
Explicacin del
tema por parte
del profesorado
Ejercicios en
Plan de Accin
Mantener
Mantener
Actividades de
aprendizaje (**)
pequeo grupo
Exposicin en
pequeos grupos
Lectura de
artculos
Bsqueda
bibliogrfica
Diseo de una
investigacin
Conferencia de
expertos
Diseo y
aplicacin de un
instrumento
978-84-695-8363-0
1682
2 - 3er curso
RPIE (optativa)
1er curso
TPIE (oblig.)
2 - 3er curso
RPIE (optativa)
1er curso
TPIE (oblig.)
2 curso
EAE (oblig.)
IERI (oblig.)
Mantener
Consensuar
niveles de
complejidad
Mantener previo
consenso de
niveles de
complejidad en
la demanda
Mantener
Introducir
cambios o
eliminarla
2 - 3er curso
IAIE (optativa)
Mantener previo
consenso de
niveles de
complejidad en
la demanda
2 - 3er curso
IAIE (optativa)
Mantener
Mantener
2 - 3er curso
IAIE (optativa)
Simulacin de
investigaciones
Ejercicios de
preparacin de
exmenes
Plan de Accin
Discusin
Los resultados constatan una total congruencia entre las competencias del ttulo, los
objetivos de aprendizaje de cada asignatura y las actividades de aprendizaje que se
desarrollan. Tambin se constata la secuencia y nivel de complejidad requerido de las
actividades de aprendizaje en las distintas asignaturas del plan de estudio. Los resultados
978-84-695-8363-0
1683
Referencias
Ahumada, M. (2011). Ponencia presentada en el Workshop Internacional Aprendizajes
Basados en Competencias. Realizado en la Universidad Tcnico Federico Santa Mara
Valparaso. Chile.
Anderson, L.W. y Krathwohl, D.R. (2001). A Taxonomy for Learning, Teaching and
Assessing: A Revision of Blooms Taxonomy of Educational Objetives. New York:
Longman.
Corominas Rovira, E. y Equipo. (2005). Competncies genriques a la formaci
universitria. Percepcions de lalumnat i del professorat. Paper presented at the VI
Seminari Permanent dOrientaci Professional.
De Miguel Daz, M. (Dir.). (2006). Modalidades de enseanza centradas en el desarrollo de
competencias. Orientaciones para promover el cambio metodolgico en el EEES.
Madrid: MEC/Universidad de Oviedo
Hernndez Pina, F. (2005). Ensear y aprender en la universidad: una adaptacin necesaria de
las titulaciones al Espacio Europeo de Educacin Superior. Revista Circunstancias, 8.
Gairn, J. (coord.); Armengol, C.; Gisbert, M.; Garca, M.J.; Rodrguez, D. y Cela, J.M.
(2009). Guia per a lavaluaci de competncies en lrea de cincies socials.
Barcelona: AQU. Disponible en internet http://www.aqu.cat/doc/doc_28508177_1.pdf.
Garca Aguilera, F.J. y Aguilera Cuenca, D. (2011). Competencias profesionales del
pedagogo: mbitos laborales y nuevos yacimientos de empleo. Mlaga: Ediciones
Aljibe.
Gonzlez, J. y Wagenaar, R. (2005). Tuning educational structures in Europe II
Universitiescontribution to the Bologna Process. Bilbao: University of Deusto &
University of Groningen.
Martnez, F.; Berlanga, V.; Reguant, M.; Rubio, M.J.; Ruiz, A.; Torrado, M.; Vila, R. y
Ahumada, M. (2012). Identification and validation of methodological research
competencies in the degree of pedagogy, University of Barcelona. 8th Internacional
Conference on Education. Grecia.
978-84-695-8363-0
1684
978-84-695-8363-0
1685
Resumen
En este trabajo se muestra el proceso seguido en el diseo y validacin de una herramienta
de evaluacin destinada al alumnado de sexto de Educacin Primaria, cuya finalidad ha sido
determinar la percepcin que manifiesta el propio alumnado sobre su desarrollo en las ocho
competencias bsicas. Su diseo parte de una fase previa de operativizacin de las
competencias bsicas. Los resultados alcanzados en el proceso de validacin proceden de
una muestra constituida por 336 alumnos de Crdoba capital y provincia. El cuestionario
resultante ha sido objeto de diferentes pruebas de validacin psicomtrica para identificar la
fiabilidad y validez del mismo. Como resultado final se ha podido comprobar que puede ser
un importante instrumento para que el alumnado de sexto de educacin primaria pueda
evaluar su propia percepcin sobre el grado de adquisicin de las competencias bsicas.
Introduccin
Mucho se ha escrito en torno al trmino competencia. Su incorporacin a la
enseanza obligatoria a partir de la publicacin de la Ley Orgnica 2/2006 de Educacin, de 3
de mayo (LOE) ha originado hasta ms de cien definiciones del trmino, confirindole un
978-84-695-8363-0
1686
carcter polismico como seala Coll (2007), Garagorri (2007), Prez (2007) y Tobn (2007).
A pesar de esta proliferacin de definiciones, la Comisin Europea (2012) insiste en la
necesidad de alcanzar una definicin clara del trmino y recuerda que stas son una
combinacin de conocimientos, destrezas y actitudes apropiadas a un contexto especfico y
que han de contribuir a la realizacin personal, al desarrollo de una ciudadana activa, la
cohesin social y la empleabilidad en la sociedad del conocimiento.
En nuestro sistema educativo se han definido ocho competencias bsicas que ha de
alcanzar el alumnado al finalizar su etapa formativa obligatoria -comunicacin lingstica,
matemtica, conocimiento y la interaccin con el mundo fsico, tratamiento de la informacin
y competencia digital, social y ciudadana, cultural y artstica, aprender a aprender y
autonoma e iniciativa personal-. En la comunidad autnoma de Andaluca, la adquisicin de
las mismas es evaluada de manera externa en diferentes momentos de la escolarizacin: en la
etapa de educacin primaria (prueba ESCALA y Pruebas de Evaluacin de Diagnstico) en
segundo y cuarto curso respectivamente y en la etapa de educacin secundaria obligatoria
(Pruebas de Evaluacin de Diagnstico).
Pero en estas pruebas externas no se evalan todas las competencias bsicas
mencionadas, por ello la Comisin Europea (2012) ha instado a los diferentes pases
miembros al fortalecimiento de las evaluaciones existentes y a generalizar la evaluacin de
todas las competencias. Al mismo tiempo, la Comisin Europea (2012) aboga por la
incorporacin de otras posibilidades evaluativas en torno a las competencias, sobrepasando
los resultados de los test estandarizados que se estn aplicando en las pruebas autonmicas,
nacionales e internacionales (PISA, PIRLS, TIMMS). La propuesta realizada se centra en el
impulso a una evaluacin formativa mediante la evaluacin por pares (peer asssessment) y la
autoevaluacin del estudiante (self-assessment), puesto que el uso de estas prcticas
evaluativas han mostrado aumentos significativos en el desempeo alcanzado por el
alumnado, incluso en nios de cinco aos de edad (Black & William, (1998) (citados en
Comisin Europea, 2012, p. 31).
En estas pginas nos centraremos en el mbito de la autoevaluacin de las ocho
competencias bsicas por parte del alumnado de sexto de educacin primaria en la provincia
de Crdoba. Esta iniciativa surge en el marco de la asignatura Orientacin educativa:
relaciones escuela, familia y comunidad en educacin primaria del grado de maestro de
educacin primaria61 y de un trabajo previo de operativizacin de las competencias bsicas
realizado por Ramrez, Lorenzo, Ruiz & Vzquez (2011) en el que se establecieron los
indicadores de evaluacin de las ocho competencias bsicas.
Al alumnado de segundo del grado de maestro de educacin primaria que cursaba la
asignatura se le propuso como trabajo de aula la elaboracin de un dossier de recursos para
mejorar las competencias bsicas del alumnado de educacin primaria desde una perspectiva
contextualizada, es decir, real. En este sentido, al no poder disponer de los datos de las
distintas pruebas debido a la confidencialidad de las mismas, se pens en la elaboracin de un
cuestionario de autoevaluacin del alumnado de sexto curso de educacin primaria sobre su
propia percepcin del desempeo o del logro alcanzado en torno a las competencias bsicas y,
as, responder a las demandas de la Comisin Europea (2012).
61
978-84-695-8363-0
1687
Nuestros objetivos, por tanto, se centraron en evaluar las competencias del alumnado
de sexto de educacin primaria desde su reflexin personal, ubicar al alumnado de grado en
contextos reales de intervencin y actuar en consecuencia y elaborar un cuestionario vlido y
fiable que pudiera medir dicha autoevaluacin.
Mtodo
La muestra participante ha estado constituida por 336 alumnos de sexto de educacin
primaria pertenecientes a 13 centros diferentes de Crdoba capital y provincia, tanto de
titularidad pblica como concertada. Esta muestra es con la que ha trabajado el grupo de 2A
del grado de maestro de educacin primaria. En cuanto al instrumento de recogida de
informacin utilizado ha sido un cuestionario. Al no disponer de una herramienta validada
para nuestro objetivo, se ha diseado el AUTOCOMB, un cuestionario que mide la
Autoevaluacin de Competencias Bsicas, a lo largo de una serie de fases que detallamos a
continuacin:
Primera fase: Establecimiento de los indicadores de evaluacin de las ocho competencias
bsicas, stos fueron tomados de la propuesta realizada por Ramrez, Lorenzo, Ruiz &
Vzquez (2011), cuyo proceso de elaboracin se detalla en la Figura 1.
Segunda fase: Elaboracin del cuestionario.62 El instrumento consta de una primera parte en
la que se solicitan datos sociodemogrficos del alumnado (preguntas 1 a 7) y de una escala de
medicin tipo Likert, que abarca desde el 1 al 5 (poco, regular, adecuado, bueno y excelente),
de acuerdo con la Orden de 10 de agosto de 2007 por la que se establece la evaluacin del
proceso de aprendizaje del alumnado de educacin primaria. La escala se estructura en ocho
dimensiones, correspondiendo a las ocho competencias bsicas: comunicacin lingstica
(tems 8 a 22), matemtica (tems 23 a 34), conocimiento y la interaccin con el mundo fsico
(tems 35 a 44), tratamiento de la informacin y competencia digital (tems 45 a 61), social y
ciudadana (tems 62 a 68), cultural y artstica (tems 69 a 75) aprender a aprender (tems 76 a
83) y autonoma e iniciativa personal (tems 84 a 89) (ver Anexo).
Tercera fase: Aplicacin del cuestionario por parte del alumnado de segundo de grado de
maestro de educacin primaria en los centros participantes tras habrseles orientado sobre el
proceso que deban llevar a cabo en dicha aplicacin.
62
978-84-695-8363-0
1688
Fuente: Ramrez, A., Lorenzo, E., Ruiz, J.R. & Vzquez, P. (2011). La evaluacin de las competencias bsicas.
ltima fase del proceso de operativizacin. ED.UCO, 5, 75-97.
Resultados
El anlisis de consistencia interna de la escala ha arrojado los resultados expuestos en
la Tabla 1. En este sentido, el valor total de Alfa en la escala (0.960) indica un nivel elevado
de estabilidad en las respuestas y, por tanto, indicios de garantas de fiabilidad. Aunque los
coeficientes ms bajos deberan ser revisados en un anlisis posterior del cuestionario, si
realizamos el mismo anlisis a cada uno de los tems el coeficiente oscila entre 0.959 y 0.960,
lo que supone que cada uno de los elementos mide una porcin de la competencia que
queremos estudiar.
Tabla 1
Coeficiente Alfa por competencia
Competencia
Comunicacin lingstica
Matemtica
Conocimiento y la interaccin con el mundo fsico
Tratamiento de la informacin y competencia digital
Social y ciudadana
Cultural y artstica
Aprender a aprender
Autonoma e iniciativa personal
Total de la escala
Coeficiente Alfa
0,813
0,890
0,793
0,845
0,791
0,800
0,852
0,778
0,960
978-84-695-8363-0
1689
La varianza explicada por estos 21 factores era de 65,047%, lo que la situara por
encima del lmite establecido por Henson & Roberts (2006). El primero de los factores
explicaba un 26,485% de la varianza, contrastando con el 4,070% del segundo factor.
Todos los tems que saturaban en el primer factor, salvo seis (CM33, CM34, CD51,
CD52, CD53 y CD56) obtuvieron unas cargas comprendidas entre 0.4 y 0.717. Las cargas de
estos seis tems fueron superiores 0.3.
Posteriormente, se realiz una rotacin de los factores (normalizacin Varimax con
Kaiser) para comprobar si se producan alguna modificacin, pero estas no tuvieron lugar y el
grfico correspondiente no pudo generar.
978-84-695-8363-0
1690
Discusin
El anlisis de fiabilidad muestra una gran estabilidad en las respuestas de forma global
para el conjunto de la escala. En cuanto a las dimensiones constituidas por las competencias
conocimiento e interaccin con el mundo fsico, social y ciudadana y autonoma e iniciativa
personal han arrojado los resultados ms bajos, lo que nos llevar a revisar los tems que
componen cada una de estas competencias.
En lo que concierne al Anlisis Factorial podemos sealar que la existencia de un
nico factor antes de realizar las rotaciones, aunque no prueba, s pude apoyar la
interpretacin de unidemensionalidad del constructo medido por la escala. Este carcter
unidemensional de carcter emprico, se complementa con una unidemensionalidad
conceptual, fruto del proceso de operativizacin realizado en torno a las competencias
bsicas.
Asimismo, podemos sealar que las cargas realizadas por los tems en el primer factor
indican que cada tem tiene en comn lo que es comn a todos los tems, es decir, la
autoevaluacin de las competencias bsicas.
La escala AUTOCOMB, por tanto, puede ser un importante instrumento para que el
alumnado de sexto de educacin primaria pueda evaluar su propia percepcin sobre el grado
de adquisicin de las competencias bsicas. No obstante, es necesario seguir mejorando el
instrumento, sobre todo en aquellas dimensiones (competencias) e tems con los valores ms
bajos.
Referencias
Coll, C. (2007). Las competencias en la educacin escolar: algo ms que una moda y mucho
menos que un remedio. Aula de Innovacin Educativa, 161, 34-39.
Comisin Europea (2012). Commission Staff Working Document. Assessment of Key
Competences in initial education and training: Policy Guidance. Recuperado de
http://ec.europa.eu/education/news/rethinking/sw371_en.pdf
Garagorri, X. (2007). Currculo basado en competencias: aproximacin al estado de la
cuestin. Aula de Innovacin Educativa, 161, 47-55.
Henson, R.K. & Roberts, J.K. (2006). Use of exploratory Factor Analysis in published
research: Common errors and some comment on improved practice. Educational and
Psychological Measurement, 66, 393-416.
Ley Orgnica 2/2006 de Educacin, de 3 de mayo. (Boletn Oficial del Estado, nmero 106,
de 4 de mayo de 2006).
Orden de 10 de agosto de 2007, por la que se establece la evaluacin del proceso de
aprendizaje del alumnado de educacin primaria en la Comunidad Autnoma de
Andaluca (Boletn Oficial de la Junta de Andaluca, nmero 166, de 23 de agosto de
2007).
978-84-695-8363-0
1691
978-84-695-8363-0
1692
9.
10.
11.
12.
13.
14.
15.
Excelente
6.
7.
8.
Bueno
5.
Adecuado
1.
2.
3.
4.
2
2
2
3
3
3
4
4
4
5
5
5
2
2
3
3
4
4
5
5
1
1
1
1
1
2
2
2
2
2
3
3
3
3
3
4
4
4
4
4
5
5
5
5
5
Poco
Regular
Anexo
28.
29.
30.
31.
32.
33.
34.
35.
36.
37.
38.
39.
40.
41.
42.
43.
44.
45.
46.
47.
48.
49.
50.
51.
52.
53.
54.
55.
56.
57.
58.
59.
60.
61.
62.
63.
64.
978-84-695-8363-0
1693
4
4
4
5
5
5
4
4
5
5
4
4
5
5
4
4
4
4
5
5
5
5
4
4
4
5
5
5
4
4
5
5
978-84-695-8363-0
1694
2
2
2
2
2
3
3
3
3
3
4
4
4
4
4
5
5
5
5
5
2
2
3
3
4
4
5
5
2
2
2
2
2
2
3
3
3
3
3
3
4
4
4
4
4
4
5
5
5
5
5
5
978-84-695-8363-0
1695
Resumen
Esta propuesta tiene como objetivo mostrar los principales resultados del proceso de diseo y
validacin de un cuestionario sobre el desarrollo de competencias profesionales en materia
de investigacin educativa. Para ello, en primer lugar, se ha realizado una revisin
documental de 7 planes de estudio de grado en Educacin Social; en segundo lugar, se ha
procedido a una validacin a travs de un grupo de expertos. El resultado ha sido un
instrumento compuesto por 2 escalas con 8 subescalas y 127 tems tipo likert con seis
opciones de respuesta. Los resultados obtenidos del proceso de validacin muestran valores
positivos, aunque hay que atender algunas cuestiones de contenido y extensin del
cuestionario. As pues, se cuenta con un cuestionario listo para analizar sus propiedades
psicomtricas con mayor profundidad.
Introduccin
Sentido y funcin de la investigacin en la Educacin Social
La prctica profesional en Educacin Social se caracteriza por ser provisional,
cambiante, dinmica y con una clara tendencia a hacerse innecesaria ya que se dirige a la
978-84-695-8363-0
1696
978-84-695-8363-0
1697
pedaggico de otras herramientas didcticas distintas a las clases magistrales para dar
respuesta a las demandas generadas en el marco de las asignaturas de metodologa de
investigacin y/o evaluacin en educacin, por dos motivos: mejorar el desarrollo didctico
orientado a la adquisicin competencial y una mayor preocupacin por la calidad de la
docencia con implicaciones en el desarrollo profesional del alumnado (Morales, 2011;
Morales y Snchez Santamara, 2012).
Este trabajo, inscrito dentro de una lnea de investigacin sobre la mejora de la
docencia universitaria en asignaturas de metodologa en Educacin Social desde 2008, se
centra en mostrar, en sus primeros pasos, el proceso de diseo y validacin de un
cuestionario sobre la adquisicin y desarrollo de competencias de investigacin,
Mtodo
Se trata de un diseo de validacin de pruebas (Jornet y Surez, 1996), que consiste en
la elaboracin y validacin de contenido, de constructo y prediccin del cuestionario sobre
Adquisicin y Desarrollo de Competencias de Investigacin en la Docencia Universitaria
(Cuestionario ADES-CIDU), con una escala sumativa tipo likert (de 1 a 6 grados).
En este trabajo solo se presentan los resultados pertenecientes a la fase I y II del
proceso de validacin: elaboracin de bancos de tems a partir del anlisis documental y juicio
de expertos, respectivamente. El resto de fases estn en proceso: la fase III sobre el proceso de
validez de constructo a travs del anlisis factorial de componentes principales (rotacin
varimax, ndice KMO, criterio de asignacin a factor .400 o superior de saturacin y menor
.300 en otros factores), fiabilidad y consistencia interna y estabilidad temporal (coeficiente
de Cronbach, inter-elementos promedio); y, fase IV de validez predictiva mediante
correlaciones (producto-momento de Pearson) y anlisis de regresin mltiple (variable
criterio puntuacin media en la asignatura: p<.001) en relacin a su capacidad para predecir el
rendimiento acadmico (Tabla 1).
Tabla 1
Sntesis del diseo metodolgico
Mtodo
Propsito
Fases
Recogida de datos
Muestra
Accesibilidad de la
informacin en web
Perfil en metodologa de
investigacin
Anlisis de datos
Anlisis de contenido:
interpretacin directa y
comparativa
Estadsticos descriptivos,
coeficiente de variacin y
coeficiente W de Kendall
Limitaciones del
proceso
Representatividad y
reflejo prctica
Criterios
muestrales
III.
IV.
Pilotaje
Aplicacin
Cuestionario ADES-CIDU
(https://students.sgizmo.com/proj
ects/preview?id=1221770)
Aleatorio estratificado: alumnado
por campus y curso
Destinatarios potenciales:
alumnado del grado de Educacin
Social
Descriptivos, factorial
componentes principales,
fiabilidad, correlaciones y
regresin mltiple
Exploratorio y local
978-84-695-8363-0
1698
Resultados
Diseo del cuestionario ADES-CIDU: validez de contenido y primera versin
Los estudios que se han centrado en la formacin en competencias de investigacin en
Educacin Social se integran dentro de los trabajos sobre el desarrollo de competencias en el
marco del Practicum (Morales, 2010) o la adquisicin de competencias profesionales en el
plan de estudios (Fullana, Pallisera y Planes, 2011). Son escasos los trabajos que centran toda
su atencin en el contenido especfico de las competencias de investigacin (Ballesteros
Velzquez, 2003; Snchez Santamara y Morales, en prensa, 2014).
Una cuestin esencial, y que aporta cierta validez de contenido, es realizar una
revisin de distintos planes de estudio sobre el grado de Educacin Social en las
universidades espaolas. Esto se hace con la doble intencin de: a) contar con referentes
comparativos; y, b) situar en un contexto ms amplio el plan de estudios de la Universidad de
Castilla-La Mancha.
Tabla 2
Caractersticas curriculares de la investigacin educativa en distintos planes de estudios de Grado en
Educacin Social, curso 2012/13
Institucin
UVEG
Materia
Educacin
Mtodos de
Investigacin
Educativa
UCM
UNED
Investigacin
para la mejora
de la realidad
social
Asignaturas
Iniciacin a la
investigacin
en
educacin
(FB);
Anlisis de datos en
educacin
(OB);
Mtodos
de
recogida
de
informacin
en
educacin
(OB);
Medicin educativa
(OB)
Crd.
28,5
Estadstica
Aplicada a las
Ciencias Sociales
(FB); Elaboracin y
Anlisis
de
Informes
de
Investigacin
Socioeducativa
(OP)
12
Estadstica aplicada
a la Educacin
(FB); Mtodos de
Investigacin
en
Educacin Social
(OB);
Investigacinaccin
y
18
Contenidos
Bases
epistemolgicas,
proceso general
de investigacin,
criterios
de
calidad de la
investigacin
cuantitativa
y
cualitativa,
diseos y recursos
tecnolgicos para
el anlisis de
datos
Introduccin a la
Metodologa de
Investigacin
y
Observacin
en Ciencias
Sociales.
Las
tcnicas
de
registro y de
anlisis
Competencias
Planificar y desarrollar
un
proyecto
de
investigacin, crear y
producir informacin y
actuar
ticamente
y
colaboracin profesional
Conocer
y
aplicar
tcnicas de recogida de
informacin; Conocer y
aplicar metodologas y
tcnicas
estadsticas
bsicas; saber analizar
los datos obtenidos;
organizar e interpretar la
informacin; desarrollar
la curiosidad intelectual
y
el
compromiso;
emplear y comprender el
lenguaje tcnico de la
investigacin pedaggica
Nociones bsicas; Detectar y formular un
Proceso general problema, de acuerdo a
de investigacin; su marco terico y
conocer
diseos
de metodologa;
tcnicas e instrumentos
investigacin;
medicin; escalas; recogida de informacin
fiabilidad
y en relacin al diseo;
organizar, analizar e
validez;
978-84-695-8363-0
sistematizacin de
prcticas
en
educacin
social
(OP)
Estadstica en la
educacin
(OB);
Elaboracin
de
proyectos
de
investigacin (OB)
12
observacin;
instrumentos de
investigacin;
anlisis de casos
Conceptos bsicos
de
Estadstica;
organizacin
y
representacin
grfica de una
variable;
estadstica
descriptiva
e
inferencial y usos
de
software
estadstico
Investigar
en
educacin,
nociones bsicas;
metodologa;
modelos
de
planificacin;
informes
de
investigacin
UPV
Los contextos
de la
educacin
Desarrollo
profesional y
prctica
socioeducativa
UPO
Investigacin
Participativa
Aplicada a la
Educacin
Social
Metodologas
participativas
de
investigacin
aplicadas
a
la
educacin
social
(OB); Modelo de
planificacin
e
investigacin
educativa (OB)
12
URLL
Investigacin,
diagnstico i
evaluacin en
educacin
social
Mtodos y tcnicas
de
investigacin
(OB); Tcnicas de
entrevista (OB);
Investigacin
aplicada
a
la
intervencin (OB)
15
Investigacin
cientfica (ciencia
y investigacin),
anlisis de la
realidad
en
ciencias sociales y
mtodos
y
tcnicas
de
investigacin
UCLM
Mtodos de
investigacin
e intervencin
educativa
Mtodos
de
Investigacin
Educativa (OB)
Nociones bsicas
y tica; proceso
general
de
investigacin:
problema, diseo,
teora muestral,
recogida
y
anlisis de datos,
difusin
de
informes
1699
interpretar
resultados;
elaborar informes.
Conocer y comprender
bases
tericas
y
metodolgicas;
diagnosticar y analizar
los factores y procesos
socioeducativos; disear,
planificar, gestionar y
desarrollar
y evaluar;
adquirir las habilidades,
destrezas y actitudes para
la
intervencin
socioeducativa
Conocer las diferentes
metodologas cientficas
y les principales tcnicas
De observacin; conocer
los
modelos
y
herramientas
de
investigacin
y
diagnstico, disear y
aplicar instrumentos de
investigacin
Detectar, analizar
y
valorar demandas
y
necesidades
socioeducativas, disear,
implementar y evaluar
proyectos investigacin;
aplicar bases tericas de
investigacin, tcnicas de
recogida y anlisis de
datos
Fuente: Elaboracin a partir de los planes de estudio de Educacin Social de las 7 Universidades escogidas en el
trabajo, 2013.
Del anlisis comparado de estos planes de estudio, y teniendo en cuenta los trabajos
publicados por la ANECA y distintos estudios sobre competencias profesionales de
investigacin en Educacin Social, as como los elementos implicados en los procesos de
enseanza-aprendizaje (Morales y Snchez-Santamara, 2012; Snchez-Santamara y Morales,
en prensa, 2014): estrategias de aprendizaje, estrategias didcticas, mbitos y competencias,
se ha elaborado la versin inicial del cuestionario.
978-84-695-8363-0
1700
Tabla 3
Estructura del Cuestionario ADES-CIDU, versin inicial
Escalas
Subtotal
Subescalas
Conocimientos bsicos
Estrategias de aprendizaje
Estrategias didcticas
Usos y obstculos tutoras
Valoracin global
5
Usos y transferencias
mbitos de aplicacin
Valoracin Global
3
8
I. Proceso de
Iniciacin a la
Investigacin
Subtotal
II. Proceso de
Experimentacin
a la Investigacin
Subtotal
Total
Subescalas
tems
Conocimientos bsicos
Estrategias de aprendizaje
Estrategias didcticas
Usos y obstculos tutoras
Valoracin global
5
Usos y transferencias
mbitos de aplicacin
Valoracin Global
3
8
57
6
9
6
6
84
17
20
6
43
127
Claridad
M
DT
3.61 .353
3.35 .590
3.51 .532
3.57 .433
3.57 .528
3.56 .280
3.74 .429
3.74 .332
3.70 .483
3.73 .370
3.62 .263
Relevancia
M
DT
3.51 .332
3.58 .668
3.63 .500
3.61 .388
3.47 .571
3.56 .305
3.42 .356
3.64 .166
3.53 .502
3.53 .262
3.55 .238
Susceptible
M
DT
3.67 .371
3.52 .558
3.62 .445
3.51 .448
3.73 .439
3.58 .258
3.61 .408
3.78 .304
3.75 .425
3.71 .288
3.63 .236
978-84-695-8363-0
1701
Escala
I-II
Subescalas
I
II
Relevancia
I-II
I
II
Susceptibilidad
I-II
I
II
Media
3.62
3.56
3.73
3.55
3.56
3.53
3.67
3.62
3.71
Sx
.263
.280
.370
.238
.305
.262
.251
.076
.830
CV
7.26
7.86
9.92
6.70
8.57
7.42
6.84
2.10
22.37
Y, en relacin a la similitud en las valoraciones dadas por los jueces, cabe comentar la
existencia de un consenso pobre pero con significacin estadstica para la claridad (p<.002) y
la relevancia (p<.001), a excepcin del criterio de susceptibilidad (p<.656). Adems, el
anlisis de los tems nos informa de que el coeficiente de correlacin de Spearman muestra
valores de intensidad medios y bajos.
Tabla 6
Sntesis del coeficiente de concordancia W de Kendall
Criterio
Calidad
Relevancia
Susceptibilidad
Valor
.138
.140
.095
Fuerza
Pobre
Pobre
Pobre
Conclusiones
De la aplicacin de la fase I y II, se ha obtenido el cuestionario ADES-CIDU.
Respecto a ello conviene comentar tres cuestiones, a saber:
El cuestionario presenta una correcta validez de contenido, al estar en relacin con los
contenidos y competencias trabajadas en los grados de Educacin Social en las
universidades espaolas. A ello, se une la abundante literatura que avala este hecho,
as como la caracterizacin de los tems recogidos en las subescalas de estrategias de
aprendizaje, entre otras.
Las valoraciones de los jueces, de acuerdo a los tres criterios escogidos para validar el
cuestionario, son bastante elevadas, en el sentido de que sus respuestas mantienen una
concordancia homognea. Este aspecto viene avalado por la significacin estadstica
en relacin al primer y segundo criterio, mientras que no sucede as en el tercer
978-84-695-8363-0
1702
criterio, a lo que hay que unir una similitud pobre en las repuestas, incluso tras haber
depurado los valores extremos. Esto plantea una revisin del cuestionario, en concreto
atendiendo a las distribuciones y concordancias de cada uno de los tems.
Un aspecto que requiere ser revisado, a la luz del comentario de ciertos jueces, as
como por cuestiones de fiabilidad en la administracin del cuestionario, es el nmero
tems en algunas subescalas, de forma especial, en la de conocimientos bsicos.
Una vez contempladas estas cuestiones, nos encontramos trabajando en el pilotaje y
administracin del cuestionario para analizar su comportamiento psicomtrico.
Referencias
ASEDES (2004). Documentos profesionalizadores.
http://www.eduso.net/archivo/docdow.php?id=143
Educacin
Social.
Fuente:
978-84-695-8363-0
1703
Orellana, N., Almerich, G., y Surez, J.M. (2010). La investigacin en Educacin Social.
Reflexiones sobre su prctica. Valencia: Palmero Ediciones.
Petrus, A. (Coord.) (1997). Pedagoga Social. Barcelona: Ariel.
Snchez Santamara, J. y Morales, S. (en prensa, 2014). Desarrollando competencias de
investigacin a travs de metodologas activas en un entorno B-learning. Revista de
Educacin. Contextos Educativos.
978-84-695-8363-0
1704
Resumen
Presentamos una propuesta didctica que pretende ofrecer al alumnado de enseanza
secundaria una educacin y una formacin bsicas en conciencia corporal a travs del rea
de msica. La finalidad es realizar una investigacin que nos permita conocer si, a partir del
rea de msica y por medio de contenidos propios de la misma, se pueden trabajar tambin
otros contenidos interdisciplinares. De este modo favorecemos la actitud, el inters y la
motivacin de los alumnos de este nivel educativo por la asignatura de msica y contribuimos
al mismo tiempo a su desarrollo integral. Esta propuesta, que surge de una necesidad
formativa, puesto que con frecuencia observamos la poca atencin que se concede a la
actitud y al conocimiento corporal, aspectos que consideramos fundamentales para conseguir
una educacin integral de los alumnos, tambin permite ofrecer a los alumnos de la ESO la
oportunidad de aprender y experimentar con tcnicas especficas.
corporal,
Educacin
Secundaria
Abstract
We are presenting a didactic proposal which wants to offer to Secondary Education students
a basic education and training in corporal conscience through the subject of music. The
purpose of this investigation is to know if by means of music and its contents, knowledge of
other subjects can be worked on. In that way, we can favour the attitude, the interest, and the
motivation of these students and contribute at the same time to their integral development.
This proposal, which arises from a formative need, because only a small attention is usually
granted to the attitude and to corporal knowledge, aspects that we consider to be fundamental
to obtain an integral education, and it also allows us to offer to the secondary students the
opportunity to learn and experiment with specific corporal techniques.
978-84-695-8363-0
1705
msica, y por otra, en promover esta motivacin a travs de una intervencin de corta
duracin de carcter interdisciplinar. Puesto que la motivacin es uno de los determinantes
ms significativos del rendimiento acadmico de los alumnos especialmente en la etapa de la
adolescencia. Localizamos diferentes estudios que analizan la motivacin que los estudiantes
de secundaria encuentran en las actividades convencionales realizadas durante sus clases de
msica en el instituto (LOWE, 2011; LEUNG Y MCPHERSON, 2010; MCPHERSO Y ONEILL,
2010). Tambin hallamos diferentes investigaciones en las que se aplican intervenciones
basadas en la msica para tratar diferentes aspectos como la agresividad (CHOI, SOO LEE Y
LEE, 2010), la interculturalidad (SIANKOPE, 2004) o diferentes enfermedades (ROBB Y
CARPENTER, 2009), pero no encontramos ninguno que tenga como objetivo aumentar la
motivacin por la msica en s misma a travs de una intervencin interdisciplinar.
Asimismo, tambin observamos la poca atencin que se concede a la actitud y el
conocimiento corporal ante situaciones de estrs o de ansiedad, por lo que existe una
necesidad formativa. Estos contextos provocan bloqueo, crispacin y suelen aparecer como
sntomas severos en algunos estudiantes que, en muchas ocasiones, merman sus posibilidades
y disminuyen su capacidad de aprendizaje. En este sentido, la poca experiencia acumulada por
los alumnos durante la aplicacin del currculo general de las enseanzas obligatorias, tanto
en primaria como en secundaria, en lo que se refiere a estos contenidos, evidencia no solo la
falta de intervencin en el trabajo de consciencia corporal, sino la extraordinaria necesidad
que sigue existiendo dentro del currculum vivencial del propio alumnado, y deja abierto todo
un abanico de posibilidades y de posibles aplicaciones. La necesaria capacidad de autoobservacin se convierte as en una experiencia educativa gratificante que aporta un eplogo
bastante significativo en los jvenes que terminan esta etapa de educacin obligatoria, y abre
un interesante camino, tanto para todos aquellos que posteriormente quieran orientar su
actividad a la realizacin de posteriores estudios superiores, como para quienes decidan
acceder directamente a la vida profesional o a cualquier otro tipo de estudios, puesto que
como personas que son, estas vivencias les sern tiles en cualquier situacin.
A travs de esta propuesta, la educacin corporal se convierte en una aportacin
fundamental en la formacin de los alumnos. Ser imprescindible un conocimiento mnimo de
la anatoma as como de diferentes tcnicas posturales y de trabajo corporal que se desarrollan
a travs de la experiencia prctica, tanto en el contexto individual como en el grupal, con el
fin de que perduren en mayor medida en los alumnos.
Mtodo
Para demostrar que el empleo de esta programacin alternativa favorece la motivacin
por la asignatura de msica se han elegido ocho grupos de alumnos, cuatro de 2 curso de la
ESO y otros cuatro de 3, de dos centros de rgimen general, y se les ha realizado los
cuestionarios seleccionados tras el anlisis de los posibles instrumentos de evaluacin para
conocer su motivacin inicial hacia la asignatura. Tras esta valoracin preliminar se ha puesto
en prctica nuestra propuesta basada en la educacin y la formacin corporal a travs de la
msica con la mitad de estos grupos, a los que hemos llamado grupos experimentales, con el
objetivo de poder medir, al finalizar nuestra intervencin, si se ha experimentado una mejora
significativa en la motivacin de dichos grupos con relacin a los alumnos de los grupos de
control, los cuales no han recibido ninguna intervencin especfica.
La intervencin realizada en los grupos experimentales contiene contenidos
interdisciplinares, y tiene una duracin de 12 sesiones. En cada una de estas sesiones se
978-84-695-8363-0
1706
Resultados
Realizando una bsqueda de informacin en cuanto a instrumentos para valorar la
motivacin de los alumnos de educacin secundaria obligatoria encontramos:
Por otra parte, nos surge la necesidad de aplicar un segundo cuestionario que nos
aporte una mayor seguridad a la hora de analizar los resultados obtenidos, as como que nos
978-84-695-8363-0
1707
sirva de ayuda en el caso de que los resultados obtenidos no se encuentren dentro de unos
patrones lgicos. Despus de comparar los cuestionarios AM-1 y CEMA-II, por ser los que
ms se podan acercar a las caractersticas del ndice EMPA, y de ampliar la informacin
previa que tenamos de los mismos, nos hemos decantado por el cuestionario AM-1 por los
siguientes motivos:
-
Discusin e implicaciones
Qu es lo que se pretende conseguir con la puesta en prctica de esta propuesta
didctica en estas condiciones?
Tras la puesta en prctica de esta propuesta didctica de un modo innovador e
interactivo, se pretende que los alumnos participantes lleguen a incorporar las herramientas y
las capacidades desarrolladas a travs del mismo a su da a da de un modo natural, tanto en
situaciones puramente acadmicas como en situaciones cotidianas, con el fin de ayudarles a
formarse ntegramente como personas sanas. Tambin se pretende que sean conscientes de la
importancia de disponer de estas herramientas para poder prevenir lesiones y enfermedades
derivadas de una mala higiene postural a la hora de realizar diferentes actividades que realizan
cada da, y de la importancia de tomar buenos hbitos. Por ltimo, tambin se pretende
ofrecer a los alumnos una aplicacin de la msica totalmente distinta a las que conocen,
promoviendo su motivacin hacia la asignatura y ayudndoles al mismo tiempo a repasar
contenidos propios de la asignatura de msica y contenidos propios otras asignaturas.
Qu se quiere demostrar?
Se quiere demostrar que a partir del rea de msica y por medio de contenidos propios
de la misma se puede contribuir al desarrollo integral de los alumnos y alumnas, puesto que
ser conscientes de nuestro cuerpo supone poseer un elemento racional de la personalidad
humana que controla y reprime los impulsos del inconsciente, para desarrollar nuestra
capacidad de adaptacin al mundo exterior y ser capaces de sentir, pensar, saber lo que
queremos y obrar con conocimiento de lo que hacemos. Tambin se quiere demostrar que por
medio de la asignatura de msica se pueden trabajar muchos otros contenidos propios de otras
reas convirtiendo unidades en principio poco atractivas para los alumnos, en contenidos
dinmicos y motivadores. Adems, de este modo se puede conseguir que asimilen mejor estos
contenidos, y se puede conseguir que los hagan suyos con mayor facilidad, incorporndolos a
su vida cotidiana en forma de hbitos saludables.
978-84-695-8363-0
1708
978-84-695-8363-0
1709
Referencias
Alonso, J. (2007). Evaluacin de la motivacin en entornos educativos. En M. lvarez y R.
Bisquerra (Eds.), Manual de Orientacin y tutora. Barcelona: Kluwer. (Libro
electrnico).
Castaer, M. (Coord.) (2006). La inteligencia corporal en la escuela: anlisis y propuestas.
Barcelona: Gra.
Choi, A.N., Soo Lee, M. y Lee, J.S. (2010). Group music intervention reduces aggression and
improves self-esteem in children with highly aggressive behaviour: A pilot controlled
trial. eCAM 2010, 7(2).
Dweck, C. y Elliot, D.S. (1983). Achievement motivation. En P.H. Mussen y E.M.
Hetherington (1983). Handbook of child psychology (vol. IV): Social and personality
development (pp. 643-691). Nueva York: Wiley.
Fubini, E. (1999). La esttica musical desde la Antigedad hasta el siglo XX. Madrid:
Alianza.
Grupo Investigacin en Accin. (2003). ndice de Evaluacin Motivacional del Proceso de
Aprendizaje, E.M.P.A. Disponible en <www.investigacionenaccion.es/sitio/> Fecha de
consulta 19/02/2013.
Juvonen, A. (2011). Students' motivation to study music: The Finnish context. Research
Studies in Music Education, 33(1), 73-88.
978-84-695-8363-0
1710
Len, C. (2006). Gua para el desarrollo del pensamiento crtico. Per: Fimart S.A.C.
Leung B.W. y McPherson, G.E. (2010). Students' motivation in studying music: The Hong
Kong context. Research Studies in Music Education, 32(2), 155-168.
Lowe, G. (2011). Class music learning activities: Do students find them important, interesting
and useful? International Journal of Music Education, 33(2), 1-17.
Lowe, G. (2012). Lessons for teachers: What lower secondary school students tell us about
learning a musical instrument? International Journal of Music Education, 30(3), 227243.
Malajovich, A. (2008). Recorridos didcticos en la educacin inicial. Buenos Aires: Paids.
Manassero, M.A. y Vzquez, . (1997). Anlisis emprico de dos escalas de motivacin
escolar. Revista Electrnica de Motivacin y Emocin, 3(5-6).
McPherson, G.E. y ONeill, S.A. (2010). Students' motivation to study music as compared to
other school subjects: A comparison of eight countries. Research Studies in Music
Education, 32(2), 101-137.
Neubauer, J. (1992). La emancipacin de la msica. Madrid: Visor.
Nez, J.C. et al. (1997). Cuestionario de evaluacin de metas acadmicas en estudiantes de
Educacin Secundaria. Oviedo: Departamento de Psicologa de la Universidad de
Oviedo.
Pardo, A. y Alonso, J. (1990). Motivar en el aula. Madrid: Publicaciones de la Universidad
Autnoma.
Pelechano, V. (1975). Cuestionario MAE (Motivacin y Ansiedad de Ejecucin). Madrid:
Fraser Espaola.
Quevedo-Blasco,
R.,
Quevedo-Blasco,
V.J.,
Tllez
Trani,
M.,
Guillen-Riquelme, A., Buela-Casal, G. y Bermdez, M.P. (2011, marzo y abril).
ndice de evaluacin motivacional del proceso de aprendizaje, E.M.P.A. Trabajo
presentado en el VI Congreso Internacional de Psicologa y Educacin. Valladolid.
Robb, S. y Carpenter, J. (2009). A review of music-based intervention reporting in pediatrics.
Journal of Health Psychology, 14.
Siankope, J. (2004). Msica e interculturalidad. Madrid: Los libros de la catarata.
978-84-695-8363-0
1711
Resumen
Presentamos el planteamiento, desarrollo y resultados de un anlisis sociocntrico en el
marco de un proyecto I+D+I que tiene por objetivo fundamental determinar en qu medida
las redes personales y sociales del alumnado inciden en su persistencia y xito escolar.
Estudiar la conformacin de los grupos, la estructura de las redes, las posiciones de sus
componentes, los patrones de relacin y autopercepciones, segn diversas naturalezas de la
cualidad del vnculo, permite evidenciar mltiples aspectos. Un avance en los primeros
resultados nos indica que el alumnado de procedencia extranjera mantiene un entramado
relacional menos denso y con tendencia a una mayor relacin con el propio grupo cultural.
En algunas aulas se rompe esta tendencia aprecindose un entramado relacional ms
culturalmente heterogneo e integrador. Emerge la hiptesis sobre la incidencia del tamao
del centro y sobre la incidencia de las acciones de atencin a la diversidad.
Introduccin
Los resultados de investigaciones recientes muestran la problemtica sobre el fracaso
escolar en la ESO de los hijos e hijas de familias migrantes (Serra, 2005), as como su
978-84-695-8363-0
1712
dificultad para transitar de forma positiva a los estudios postobligatorios. Desde el momento
en que una persona inicia un proceso migratorio, las redes sociales juegan un papel
importante, tanto en el lugar de partida como en el contexto de llegada. Ese entramado
relacional es fundamental en el anlisis y comprensin de la evolucin de los procesos de
integracin que comportarn cierto nivel de reestructuracin de sus relaciones y entornos.
Desde esta perspectiva, no son las coordenadas geogrficas las que marcan la posicin dentro
de las comunidades sino las coordenadas relacionales. Las prcticas cotidianas como el
trabajo, la escolarizacin, la familia, las amistades, son relacionales y es importante
analizarlas bajo ese prisma. El presente pster se enmarca en el desarrollo proyecto I+D+i63
de corte longitudinal cuyo objetivo es determinar en qu medida las redes personales y
sociales (composicin, estructura y funcionalidad) del alumnado inmigrante pueden
empoderar (constituir un factor promotor/protector) de sus trayectorias acadmicas incidiendo
en su persistencia y xito escolar.
Centrndonos en la identificacin de las redes sociales, nos basamos en un anlisis
sociocntrico que permite, por un lado, analizar las relaciones interpersonales entre los
adolescentes y jvenes y, por otro, estudiar la forma en que se conforman los grupos clase as
como las posiciones de sus componentes en la red social del aula. As, conociendo el modo en
que stos se relacionan, se pueden evidenciar aspectos que influyen, entre otros, en el clima
escolar, y que pueden llegar a vincularse al desarrollo de trayectorias acadmicas de xito y
no xito (Garcia, Bells y Marande, 2009). El objetivo del pster es mostrar la potencialidad
de la Teora de Redes y revelar las posibilidades del anlisis sociocntrico para analizar,
diagnosticar e identificar estructura, composicin y funcionalidad de las redes sociales del
alumnado de procedencia extranjera. Para ello, mostramos diversos anlisis reticulares a partir
del anlisis de dos aulas de Educacin Secundaria Obligatoria de la provincia de Barcelona
que nos permitirn elaborar tendencias tipolgicas de redes sociales en grupos clase.
Mtodo
El anlisis de redes sociales como enfoque terico-conceptual y metodolgico (Molina,
2001) ha generado recientemente un gran inters entre la comunidad cientfica en el estudio
de los procesos de integracin social de la poblacin inmigrante y en el desarrollo acadmico
de los grupos minoritarios. Metodolgicamente, las redes permiten unir y vincular lo macro
(factores estructurales que pueden condicionar las migraciones, como niveles salariales, PIB,
riqueza nacional), lo micro (decisiones individuales de los actores migrantes) y lo meso
(procesos sociales y grupales de formacin de opinin, intercambio de informacin) (Aparicio
y Tornos, 2005). En este estudio, el enfoque ARS ha permitido caracterizar e interpretar las
relaciones de atraccin y rechazo, las de proximidad, distancia y estructura social y
caracterizar a los alumnos segn su centralidad grupal e individual y otros indicadores
reticulares, adems de proporcionar informacin sobre caractersticas estructurales y
funcionales de las redes segn el tamao de los grupos y su distribucin, ya sea por gnero,
nacionalidad, grupo cultural, etc.
Se ha elaborado un cuestionario sociocntrico que tiene como objetivo general medir y
analizar las relaciones interpersonales entre los jvenes que configuran el grupo clase y cuyos
objetivos especficos son:
63
978-84-695-8363-0
1713
VARIABLES
RELACIONALES
DIMENSIONES
Informaciones socio-demogrficas
Expectativas de futuro acadmicas
Autoconcepto
Integracin grupo clase
Sentimiento de pertenencia
Grado de relacin
Intensidad de amistad
Intencin o deseo de trabajar con otro compaero de clase
978-84-695-8363-0
1714
Resultados
Los resultados que mostramos aparecen organizados en tres apartados. El primero se
refiere a indicadores reticulares del Caso Sabadell sobre la estructura de amistad en la clase.
En el segundo apartado se analiza el aula del Caso Hospitalet teniendo en cuenta la estructura
del aula conformada desde la pregunta me gustara trabajar con y focalizando a modo de
ejemplo, en estudiantes concretos y considerando variables atributivas como la
autopercepcin acadmica o el sentimiento de integracin. Por ltimo, se realiza una breve
comparacin de variables e indicadores de las dos aulas.
978-84-695-8363-0
1715
978-84-695-8363-0
1716
Tabla 2
Estudiantes de procedencia extranjera ordenados de mayor a menor puntuacin en los indicadores reticulares: Indegree, Betweenness e ndice de poder de Bonacid (Sexo: 1
chico, 2 chica)
INDEGREE
BETWEENNESS
PODER DE BONACID
978-84-695-8363-0
1717
978-84-695-8363-0
1718
978-84-695-8363-0
1719
Chicas
Chicos
Figura 6. Redes Amistad Caso Hospitalet (n=30) y Caso Sabadell (n= 18) y sexo
Pese a esta separacin por sexo, en general, podemos decir que se trata de redes en
las que sus miembros estn bastante relacionados.
Si tomamos en cuenta la variable del sentimiento de integracin recogido en la
Figura 7, vemos que en el Caso Hospitalet, existe una coherencia entre el sentimiento
percibido sobre la propia integracin y la estructura de amistad que aparece. As, el
alumnado que se siente ms y bastante integrado, ocupa posiciones centrales en la red
de amistad y los que se sienten poco integrados posiciones ms perifricas. En cambio,
en el Caso Sabadell, el alumnado que se siente muy integrado est fuera del centro de la
red de amistad y, sin embargo, hay alumnos que se sienten poco integrados que s
ocupan posiciones relativamente ms centrales.
Muy integrados
Bastante Integrados
Poco integrados
Nada integrados
Figura 7. Redes Amistad Caso Hospitalet (n=30) y Caso Sabadell (n= 18) y Sentimiento de
Integracin
Discusin
Para finalizar esta presentacin retomamos el objetivo del pster que es mostrar la
potencialidad de la Teora de Redes y revelar las posibilidades del anlisis sociocntrico
para analizar, diagnosticar e identificar estructura, composicin y funcionalidad de las
redes sociales del alumnado de procedencia extranjera.
978-84-695-8363-0
1720
Referencias
Aparicio, R. y Tornos, A. (2005). Las redes sociales de los inmigrantes
extranjeros en Espaa. Madrid: Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales.
Garcia, F.J., Bells, I. y Marande, G. (2009). Los subgrupos informales de
alumnos y alumnas en las aulas de primero de primaria: un estudio piloto para su
identificacin y caracterizacin. Castelln: Publicacions Universitat Jaume I.
Molina, J.L. (2001). El anlisis de redes sociales. Una introduccin. Barcelona:
Bellaterra.
Sandn, M.P., Palou, B. y Cano, A. (2012). Qestionari sociocntric. Escola i
xarxes
socials.
Dipsit
digital
de
la
UB.
Disponible
en
<
http://hdl.handle.net/2445/34580>
Serra, C. (Coord.) (2005). Lefecte dels centres sobre la continutat dels alumnes
membres de famlies immigrades en el pas de lescolaritzaci obligatria a la
postobligtria. Informe. Barcelona: Fundaci Jaume Bofill.
978-84-695-8363-0
1721
Anexo 1
Este instrumento recoge datos e informacin para graficar, mediante el software
UCINET, las relaciones que se establecen entre los alumnos que conforman el grupo
clase y los aspectos clave en trminos de capital social, como quines juegan un rol
central en la red del aula, quines ocupan una posicin perifrica o aislada en la red,
quines juegan una posicin de puente, etc.
Masculino
Femenino
CARACTERIZACIN
sentimiento de pertenencia):
DEL
ESTUDIANTE
(acadmica,
integracin,
1.
Si apruebas 4t de ESO; seguirs
estudiando?
(Slo puedes escoger una opcin)
Si, seguro
Todava no lo s
No, no seguir estudiando
2.
Te sientes integrado en tu grupo
clase?
(Slo puedes escoger una opcin)
S, mucho
Bastante
Un poco
Nada
3.
En general, te consideras un
buen estudiante?
(Slo puedes escoger una opcin)
Si, muy bueno
Bastante bueno
Regular
Malo
T, de dnde te sientes?
4.
(Pon una cruz en la opcin que
consideres)
De Catalua
De Espaa
De Catalua y Espaa
De mi lugar de origen (nacimiento,
familiar...)
De aqu y de mi lugar de origen
De muchos lugares
De ningn sitio
No lo s
Otros (especificar): ................................
ESTUDIO DE RELACIONES
A continuacin encontrars tres preguntas sobre tu relacin con tus compaeros y
compaeras de tu grupo-clase. Para responder, tienes que poner una X segn la
siguiente valoracin:
1
NADA
2
POCO
978-84-695-8363-0
3
ALGO
1722
4
BASTANTE
5
MUCHO
RECUERDA QUE:
1
NADA
2
POCO
3
ALGO
4
BASTANTE
5
MUCHO
1
NADA
2
POCO
3
ALGO
4
BASTANTE
5
MUCHO
2
POCO
3
ALGO
4
BASTANTE
1
Ahumada Isanova, Juan
Camilo
5
MUCHO
978-84-695-8363-0
1723
Resumen
En la presente comunicacin se describe el mtodo utilizado para la adaptacin del
Cuestionario de Opinin al Alumnado sobre la docencia del profesorado de la Euskal
Herriko Unibertsitatea/Universidad del Pas Vasco (EHU/UPV). Este trabajo es
consecuencia del encargo realizado por el Servicio de Evaluacin Docente (SED) que
es el rgano encargado de gestionar dicho Cuestionario. El Cuestionario actual est
incorporado con total normalidad a la actividad cotidiana de la Universidad pero los
cambios, que se estn viviendo actualmente como consecuencia de la implantacin de
nuevos Grados y Postgrados adaptados al Espacio Europeo de Educacin Superior
(EEES), han planteado la necesidad de adaptarlo a la nueva realidad. Las fases en la
construccin del nuevo cuestionario han sido las siguientes: anlisis estadstico del
cuestionario actual a travs de los datos recogidos durante los ltimos 5 cursos, estudio
terico de las competencias del profesorado en el EEES y descripcin del marco
terico del nuevo cuestionario, propuesta de nuevo cuestionario a partir del anlisis y
marco terico decidido, realizacin de grupos de discusin con expertos, profesorado y
alumnado, aplicacin piloto del nuevo cuestionario, construccin y validacin del
cuestionario definitivo. En el momento de redactar este resumen, nos encontramos en la
fase de preparacin de la aplicacin piloto por lo que es de prever que para la fecha de
celebracin del Congreso el proceso haya finalizado.
978-84-695-8363-0
1724
years; the theoretical study of the skills of the teaching staff in the EHEA and the
description of the theoretical framework of the new questionnaire; the proposal for the
new questionnaire based on the analysis and theoretical framework decided upon; the
undertaking of discussion groups with experts, teaching staff and students; the pilot
application of the new questionnaire; and the construction and validation of the
definitive questionnaire. On writing this abstract, we are at the stage of preparing the
pilot application, and so it is anticipated that the process will have been completed for
the Congress when we will be in a position to present the definitive results.
Introduccin
Este proyecto de adaptacin del cuestionario de Opinin al Alumnado sobre la
docencia del profesorado en la Euskal Herriko Unibertsitatea/Universidad del Pas
Vasco EHU/UPV est siendo llevado a cabo por un grupo de profesores del
Departamento de Mtodos de Investigacin y Diagnstico en Educacin (MIDE) que
estn coordinados con el Servicio de Evaluacin Docente (SED/IEZ) dependiente del
Vicerrectorado de Profesorado, y que velar por el correcto desarrollo del proceso de
creacin y adaptacin del cuestionario.
El Servicio de Evaluacin Docente se encarga, entre otras funciones, de
gestionar la Encuesta de Opinin al Alumnado sobre la Docencia de su Profesorado,
que surgi en el curso 88/89 con un carcter voluntario, y tras varias modificaciones, en
los ltimos aos se ha ido aplicando en todos los centros de la EHU/UPV y est
incorporada con total normalidad a la actividad cotidiana de la universidad.
Actualmente, estamos viviendo importantes cambios en la docencia universitaria, con la
implantacin de los nuevos Grados y Postgrados adaptados al Espacio Europeo de
Educacin Superior, por lo que es innegable la necesidad de adaptar la Encuesta de
Opinin al Alumnado sobre la Docencia de su Profesorado a esta nueva realidad.
En la EHU/UPV, desde el curso 2006/07, se ha aplicado un cuestionario de
opinin al alumnado que ha respondido al paradigma educativo requerido por el Espacio
Europeo de Educacin Superior. Este hecho ha supuesto la antesala del diseo de este
nuevo cuestionario que se pretende sea ms ajustado al modelo IKD (enseanzaaprendizaje cooperativo y dinmico centrado en el alumnado) y que se configura como
propuesta para el desarrollo curricular de las enseanzas en la EHU/UPV.
Las caractersticas del modelo IKD son las siguientes:
978-84-695-8363-0
1725
Para finalizar, se plantea de nuevo la pregunta con la que se inici este informe:
Qu debe plasmar un cuestionario que recoge la opinin del alumnado sobre la
docencia que recibe? El modelo educativo IKD y el programa de evaluacin formativa
DOCENTIAZ nos aportan numerosas pistas sobre las funciones que, en el marco de la
convergencia con Europa, debe desarrollar un profesor o profesora. Con la implantacin
de los nuevos grados y posgrados se ve la necesidad de construir un cuestionario que, en
primer lugar, responda al modelo educativo IKD por el que apuesta la EHU/UPV, con
su correspondiente vertiente formativa y, en segundo, que cumpla con las condiciones
de fiabilidad y validez que acompaan a todo cuestionario bien diseado. Resulta
fundamental considerar que todas las dimensiones que componen el cuestionario deben
converger en un nico objetivo: especificar una serie de acciones docentes que logren
que los y las estudiantes aprendan. En consecuencia, como resultado se espera que el
alumnado opine sobre la capacidad del profesorado de fomentar en ellos y ellas sus
capacidades para lograr un aprendizaje significativo, tanto en el orden profesional como
en el personal.
En la presente comunicacin se describe el mtodo utilizado para la adaptacin
del Cuestionario de Opinin al Alumnado sobre la docencia del profesorado de la
EHU/UPV. En otra comunicacin presentada en este mismo Congreso se exponen los
resultados de este trabajo.
Mtodo
Las fases de este proyecto de adaptacin del cuestionario de evaluacin han sido
las siguientes:
978-84-695-8363-0
1726
1.-Anlisis estadstico del cuestionario actual. Se han llevado a cabo diversos anlisis
con los datos recogidos durante los ltimos 5 cursos. Dichos anlisis han evaluado la
validez y fiabilidad del actual instrumento, su estructura factorial, su estabilidad en el
tiempo, la relacin entre las variables contextuales y la evaluacin realizada por el
alumnado y, por ltimo, la relacin de la autoevaluacin del alumnado con la
evaluacin de las profesoras y profesores. Dado que uno de los objetivos planteados en
el proyecto es la adaptacin del cuestionario, tanto a las asignaturas de grado como a las
de postgrado, estos anlisis se han hecho diferenciados para cada tipo de estudio. Como
ya se ha mencionado anteriormente, no es objeto de esta comunicacin ofrecer
resultados estadsticos pero de cara a conocer el punto de partida de este proceso, habra
que decir que nos hemos encontrado con un instrumento fiable, estable y vlido desde el
punto de vista estadstico. En definitiva, hemos partido de un instrumento que funciona
bien de cara a los objetivos que pretende conseguir.
2.- Anlisis del contenido del cuestionario actual. Este trabajo estadstico junto a la
reflexin crtica del grupo de expertos nos ha ayudado a identificar los tems
susceptibles de ser reformulados o directamente eliminados. La primera funcin que ha
completado el grupo de expertos, constituido despus de los anlisis estadsticos, ha
sido la recogida y puesta en comn en un grupo de discusin de las impresiones
referentes al cuestionario actual, tanto sobre sus puntos fuertes a mantener como los
cambios que deberan producirse en el mismo. Este proceso ha derivado en el cambio de
los tems del cuestionario actual que se consideren irrelevantes o confusos y en la
formulacin de los nuevos tems que compondrn el nuevo instrumento.
3.- Definicin del marco terico del nuevo cuestionario. Para ello, se ha hecho una
revisin bibliogrfica de las competencias que debe tener el profesorado en el Espacio
Europeo de Educacin Superior. Paralelamente a esta revisin bibliogrfica, se ha
analizado el modelo educativo de la EHU/UPV para tratar de determinar el modelo de
profesorado al que aspira la propia universidad de cara a que el nuevo cuestionario
tenga un enfoque formativo con la intencin de recoger, en la medida de lo posible,
aquellas acciones que conducen al desarrollo de una buena prctica docente.
4.-Recopilacin y anlisis de cuestionarios utilizados en otras universidades. En
este proceso se ha hecho un estudio comparativo entre cuestionarios de diferentes
universidades, tanto de universidades del Estado Espaol (18 universidades) como de
universidades extranjeras (10 universidades). Adems, tambin se ha incluido en el
estudio comparativo el cuestionario que propone la ANECA (Agencia Nacional de
Evaluacin de la Calidad y de Acreditacin). Nuestra opinin es que el anlisis de los
cuestionarios utilizados en otras universidades ms o menos cercanas a la situacin de la
EHU/UPV, junto con los estudios tericos o empricos realizados puede ayudar a
mejorar el nuevo cuestionario adaptado al Espacio Europeo de Educacin Superior.
5.- Creacin del nuevo cuestionario. Una vez que se han conocido los tems que no
funcionaban correctamente o que funcionaban peor, tanto a nivel estadstico como
funcional, se han integrado las conclusiones del grupo de expertos con los
conocimientos de los tcnicos especializados en la evaluacin docente. A partir de aqu,
se ha formulado un primer cuestionario que a continuacin se ha puesto a disposicin de
diferentes agentes educativos (alumnado y profesorado) para su consideracin de cara a
perfilar el que ha sido el cuestionario piloto.
978-84-695-8363-0
1727
978-84-695-8363-0
1728
corroborar los resultados obtenidos en la primera, ser llevada a cabo nicamente si los
cambios realizados en esta ltima fase fueran cuantiosos. De no ser as, se aprovecharn
las primeras administraciones experimentales del cuestionario para continuar efectuando
anlisis estadsticos referentes a la fiabilidad y validez del cuestionario.
Resultados
Como resultado del anlisis del cuestionario utilizado los ltimos 5 cursos
acadmicos y del proceso de reflexin, tanto terico como a travs de los grupos de
discusin, en las siguientes lneas se presenta el conjunto de tems que se van a utilizar
en la aplicacin piloto:
La gua del estudiante (programacin) es til para el seguimiento de la
asignatura
Planifica de manera ordenada la asignatura
Los recursos recomendados (bibliografa, materiales, TICS, etc.) facilitan
nuestro aprendizaje
Los criterios y procedimientos de evaluacin han sido claramente comunicados
al comienzo
El nivel de dificultad de las clases se adecua a nuestros conocimientos previos
Explica de manera clara y ordenada
Favorece la actitud reflexiva y crtica
Propone actividades para favorecer el aprendizaje autnomo (bsqueda de
informacin, resolucin de casos y problemas prcticos, investigaciones, etc.)
Estimula la colaboracin y el trabajo en equipo
Corrige e informa sobre las actividades y trabajos con el fin de que se pueda
mejorar
Motiva al alumnado para que se interese por su proceso de aprendizaje
Atiende las consultas que se le plantean
Transmite entusiasmo impartiendo esta asignatura
Estimula el desarrollo de la expresin oral y/o escrita
Intenta que entendamos la conexin de la asignatura con el resto de asignaturas
Utiliza una metodologa y unos recursos didcticos que favorecen el aprendizaje
He aprendido mucho cursando esta asignatura
He mejorado mi nivel de partida con relacin a las competencias previstas
En general, pienso que es un buen profesor o profesora
Si pudiera, me volvera a matricular en otra asignatura impartida por este
profesor o profesora
En la Tabla 1 se presentan las tres dimensiones que recoger el cuestionario
definitivo, junto con las definiciones y resultados de aprendizaje correspondientes a
cada una de las dimensiones.
Tabla 1
Definicin y resultados de aprendizaje de las dimensiones del Cuestionario de Opinin al
Alumnado sobre la docencia del profesorado de la EHU/UPV
Dimensin
Definicin
Resultados de aprendizaje
Esta dimensin se
refiere a todo el proceso
previo de reflexin y
diseo de la docencia
de una materia con
objeto de promover un
aprendizaje activo y
autnomo.
Planificacin
de la docencia
978-84-695-8363-0
Desarrollo de la
docencia
e
interaccin
docente
Resultados
Resultados
de
aprendizaje previstos.
Claridad con la que
estn planteados los
objetivos
y
las
competencias
a
desarrollar.
Organizacin de la
enseanza
(clases
prcticas,
prcticas
externas,
seminarios,
clases tericas, tutoras,
etc.).
Planificacin de la
enseanza
y
del
aprendizaje
con
relacin a las materias o
asignaturas impartidas.
Actividades
de
aprendizaje previstas.
Criterios y mtodos de
evaluacin.
Materiales y recursos
para la docencia.
Viabilidad de desarrollo
efectivo del programa
desde la perspectiva del
tiempo
que
debe
invertir el estudiante.
1729
978-84-695-8363-0
1730
978-84-695-8363-0
1731
Resumen
En este trabajo se presentan los resultados de los anlisis estadsticos realizados con
los datos de los cuestionarios de satisfaccin sobre la docencia recibida que los
estudiantes de la UPV-EHU cumplimentan evaluando la actividad de los docentes. Los
datos analizados se refieren a 5 cursos acadmicos con un total aproximado de 900.000
casos. Los anlisis realizados han sido: estudio de la fiabilidad del cuestionario,
estructura factorial del mismo, criterios de validez, estabilidad en el tiempo de las
valoraciones, estudio diferencial en funcin de algunas variables contextuales y
relacin de la autoevaluacin de los alumnos con la evaluacin de los profesores. Los
resultados apuntan a un cuestionario con una estructura unidimensional muy clara y
con una alta fiabilidad tanto desde la perspectiva de la consistencia interna como de la
estabilidad en el tiempo. La validez arroja valores ms que aceptables.
978-84-695-8363-0
1732
Introduccin
En esta comunicacin se presentan algunos resultados de los anlisis estadsticos
correspondientes a las evaluaciones de los docentes de la UPV-EHU realizadas por los
estudiantes empleando el cuestionario de opinin del alumnado. Se trata de
cuestionarios de satisfaccin sobre la docencia recibida que los estudiantes de la UPVEHU cumplimentan de cada asignatura recibida, evaluando la actividad de los docentes.
Los datos analizados se refieren a 5 cursos acadmicos (desde el 2006-2007 hasta el
2010-2011) con un total aproximado de 900.000 casos. El cuestionario consta de 26
elementos (en una escala Likert de 5 valores) mediante los que se valoran diferentes
dimensiones de la actividad docente. Junto a estos, hay un elemento criterio de
valoracin global del docente y elementos de informacin sociodemogrfica junto con
una autoevaluacin de los estudiantes relativa a su nivel de inters y asistencia por la
asignatura evaluada.
En concreto, se abordan las siguientes cuestiones:
1. Deteccin casos de valoracin constante (y eliminacin).
2. Anlisis de la fiabilidad del cuestionario.
3. Estructura factorial del cuestionario.
4. Criterios de validez del cuestionario.
5. Estabilidad en el tiempo.
6. Relacin variables contextuales con la valoracin.
7. Relacin de la autoevaluacin de los alumnos con la evaluacin de los
profesores.
8. Valoracin global.
978-84-695-8363-0
1733
10,93
10
8
6,6
6
5,07
3,42
3,2
Ciencias
experimentales
Enseanzas
Tcnicas
0
Humanidades
978-84-695-8363-0
1734
Alfa de Cronbach
,967
,968
,969
,969
,970
N de elementos
26
26
26
26
26
Las correlaciones entre los elementos y el total de la prueba son para todos los
tems superiores a 0,69, siendo en la mayora de los casos cercanas a 0,75. La nica
excepcin la conforma el primer tem, cuya correlacin con el total de la prueba es de
solo 0,582. Se trata de una pregunta relativa a si la programacin de la asignatura ha
estado enfocada al desarrollo de competencias y, como se ver, se trata de un elemento
con un comportamiento ligeramente distinto al resto. Al margen de esta cuestin, en
ningn caso, el valor del Alfa se incrementa en caso de eliminar el elemento. En
conclusin, se puede afirmar que el cuestionario posee una elevada fiabilidad desde el
punto de vista de la consistencia interna.
978-84-695-8363-0
1735
978-84-695-8363-0
1736
Figura 4. Correlaciones de cada tem con el tem criterio en cada campo cientfico
Para todos los campos cientficos, los tems que muestran una correlacin ms
alta con el criterio son el 7 (desarrolla su docencia de manera clara y ordenada), el 11
(motiva al alumnado para que se interese por su proceso de aprendizaje) y el 19 (atiende
adecuadamente las consultas que se le plantean). Por el contrario, el tem 1 (la
programacin est enfocada hacia el desarrollo de competencias para la profesin) es el
que muestra una relacin ms baja. Este bajo nivel de asociacin puede indicar que la
formulacin del tem es mejorable y que la cuestin de las competencias profesionales
no es an conocida o valorada suficientemente. Al margen de lo anteriormente afirmado
sobre la clara unidimensionalidad del instrumento, estos resultados sealan que los
aspectos a los que los estudiantes ms peso otorgan a la hora de considerar lo que es
buen docente son el hecho de que explique de manera clara y ordenada, que motive y
genere inters y que atienda correctamente las consultas que se le formulen.
Por ltimo, constatar que no hay diferencias importantes entre los diferentes
campos cientficos en las relaciones entre cada uno de los tems y el tem criterio.
El anlisis de las relaciones de cada tem con la valoracin media global de
todos los tems analizados reitera los resultados antes presentados y, al igual que en la
relacin con la variable criterio, confirman la baja relacin del tem 1 (programacin
orientada a las competencias).
Para estudiar la estabilidad a lo largo del tiempo de las puntuaciones otorgadas
por los estudiantes, se analizaron las correlaciones de los tems con el tem criterio a lo
largo de las diferentes campaas. En el grfico siguiente se observa que las mismas
permanecen constantes en los diversos cursos acadmicos lo que ha de ser interpretado
como un indicador de estabilidad, validez y consistencia.
978-84-695-8363-0
1737
En la Figura siguiente se puede apreciar que los tems que ms se asocian a una
alta valoracin global son los mismos en los estudios de Grado y en los de Mster. La
diferencia ms importante se da en el primer tem que incrementa su correlacin en los
estudios de postgrado, lo que podra indicar que tanto la comprensin conceptual como
la sensibilizacin de los estudiantes hacia el enfoque competencial es mayor en este
segmento de poblacin y en este tipo de estudios.
Figura 6. Correlaciones de cada tem con el tem criterio en Grado, Mster Profesional y
Mster de Investigacin
978-84-695-8363-0
1738
que esta tendencia se invierte en el caso de las asignaturas consideradas como muy
fciles para las que, en lneas generales, las valoraciones disminuyen. Como se puede
apreciar en la Tabla 3, esta tendencia se resume y observa ntidamente tanto en el tem
criterio como en el promedio de todos:
Tabla 3
Valoracin media global y del tem criterio en funcin del nivel de dificultad de la asignatura
NIVEL de DIFICULTAD de Valoracin media del tem Valoracin promedio
la Asignatura
Criterio
de todos los tems
Muy difcil
3,29
3,19
Difcil
3,70
3,52
Normal
3,94
3,72
Fcil
4,00
3,78
Muy fcil
3,78
3,62
Valoracin global
La presente comunicacin se enmarca en el proceso de adaptacin del
Cuestionario de Opinin al Alumnado sobre la docencia del profesorado de la Euskal
Herriko Unibertsitatea/Universidad del Pas Vasco (EHU/UPV). Se ha podido
comprobar, por una parte, que el Cuestionario est incorporado con total normalidad a
la actividad cotidiana de la Universidad pero los cambios que se estn viviendo
actualmente como consecuencia de la implantacin de nuevos Grados y Postgrados,
adaptados al Espacio Europeo de Educacin Superior (EEES), hacen necesaria su
adaptacin a la nueva realidad.
978-84-695-8363-0
1739
978-84-695-8363-0
1740
Resumen
El propsito del estudio es demostrar si la variable estado civil de los padres de
alumnos de 3 de ESO de un instituto pblico tienen algn tipo de relacin con el nivel
de desarrollo de la inteligencia emocional de stos. Se ha llevado a cabo un estudio no
experimental correlacional de donde se han extrado las relaciones concretas entre las
variables presentadas. En el estudio han participado 40 alumnos de 3 de la ESO a
quienes se les ha aplicado la Escala de Inteligencia Emocional TMMS- 24 versin
castellana (2004) en formato papel y lpiz. Los resultados del estudio correlacional
muestran que no hay diferencias estadsticamente significativas entre las dos variables
relacionadas. nicamente en el apartado Claridad hay una pequea significacin
que no nos permite concluir que haya diferencias significativas por lo que el campo de
estudio queda abierto a posibles investigaciones futuras con diferentes contextos,
ampliando el nmero de sujetos y las diferentes situaciones y poder alcanzar as, un
mayor nivel de generalidad de los datos.
978-84-695-8363-0
1741
Introduccin
El trmino Inteligencia Emocional fue acuado formalmente a principio de los
aos 90 por Peter Salovey y John Mayer (Extremera y Fernndez- Berrocal, 2004) pero
no fue hasta 1995 cuando el trmino se populariz gracias al best seller de Daniel
Goleman Inteligencia Emocional (Goleman, 1996). Adems de este best seller,
numerosos fueron los artculos publicados en Estados Unidos sobre este tema (Burke,
2002; Mayer, Salovey y Caruso, 2004) en lengua inglesa y actualmente, numerosas han
sido las contribuciones que han permitido desarrollar el actual cuerpo de conocimiento
sobre Inteligencia Emocional en lengua inglesa y espaola a manos de autores como:
Bar-On (1997), Valls y Valls (1996), Extremera y Fernndez-Berrocal (2002), y
Bisquerra (2003), entre otros.
Desde sus inicios hasta hoy en da, el concepto Inteligencia Emocional ha
sufrido algunos cambios y variaciones que aparecen en las diferentes publicaciones de
autores como: Bar-On, 1997, Cooper y Sawaf (1997)y Goleman (1997) quienes,
adems de elaborar y reelaborar el concepto, propusieron algunas escalas de medicin
del mismo. Cabe destacar la escala elaborada por Salovey y su equipo en 1995, el Trait
Meta-Mood Scale 48 (TMMS 48) de inteligencia emocional que tena como propsito
evaluar la estabilidad de las personas en su forma de atender, discriminar y regular
estados de nimo, emociones personales y de otros. De 48 tems, qued reducida a 24
en la versin al castellano elaborada por Fernndez-Berrocal et al., (2004) que quedaban
repartidos en 8 tems para cada una de las partes: atencin, claridad y reparacin
(Snchez, Rodrguez y Padilla, 2007).
Una primera definicin sobre IE, fue formulada y redactada por Salovey y
Mayer en su primer artculo sobre inteligencia emocional en 1997 con una clara
orientacin hacia el procesamiento cognitivo de la informacin emocional. As pues, se
presenta la definicin de IE como la habilidad para percibir las emociones, acceder a
ellas, generar estados emocionales que ayuden al pensamiento, entender las emociones,
poseer de un conocimiento emocional, regular las emociones reflexivamente para
promover el crecimiento emocional e intelectual (Mayer y Salovey, 1997). Adems,
estos autores destacaron cuatro habilidades dentro de la Inteligencia Emocional:
percepcin y expresin emocional para reconocer las propias emociones, facilidad
emocional para generar sentimientos y facilitar el pensamiento, comprensin emocional
que integra lo que se siente dentro del pensamiento y regulacin emocional que dirige y
maneja las emociones negativas y positivas de forma eficaz (Mayer y Salovey, 1997;
Extremera y Fernndez-Berrocal, 2002). Estas habilidades entendidas como las
capacidades y disposiciones para crear voluntariamente un estado de nimo o
sentimiento a partir de las ideas que se tienen sobre lo que ocurre (Valls y Valls,
1996), permiten aprender a atribuir significados emocionalmente deseables a los
acontecimientos que tienen lugar en las relaciones que se establecen con los otros. De
esta manera, conociendo qu pensamientos y comportamientos provocan los diferentes
estados de nimo, se puede generar una mejora de los mismos para solucionar los
problemas que los provocan.
Otro modelo relevante en el campo de la Inteligencia Emocional fue el de Daniel
Goleman. ste afirmaba que se necesitaba una nueva visin del estudio de la
inteligencia humana ms all de los aspectos cognitivos e intelectuales que resaltase la
importancia del uso y gestin del mundo emocional y social para comprender el curso
de la vida de las personas (Goleman, 1996; Extremera y Fernndez-Berrocal, 2004).
978-84-695-8363-0
1742
978-84-695-8363-0
1743
Hiptesis
La hiptesis de investigacin es:
-
Los alumnos con padres casados o que viven juntos presentan un mayor nivel de
inteligencia emocional en relacin a aquellos alumnos con padres divorciados o
familia monoparental que presentan un nivel de IE mucho ms bajo.
Existe relacin estadsticamente significativa entre la inteligencia emocional de los
alumnos y el estado civil de sus padres.
978-84-695-8363-0
1744
Mtodo
Tipo de investigacin y diseo
Se trata de una investigacin no experimental donde se han seleccionado los
sujetos con un muestreo no probabilstico disponible, es decir, se han seleccionado dos
grupos-clase con caractersticas relevantes para la investigacin: variedad de estado
civil de los padres. El tipo de estudio es el correlacional donde permite analizar el nivel
de relacin existente entre la IE de los alumnos y el estado civil de sus padres.
Participantes
Cuarenta nios/as de edades comprendidas entre los 14 y 15 aos de dos grupos
de 3 de ESO de un instituto pblico de Muro de lAlcoi. De estos 40 sujetos, 20 son
chicas y 20 chicos. La muestra seleccionada ha sido analizada previamente para extraer
el estado civil de los padres y tener variedad de todos ellos. Es por ello que
concretamente la muestra es de cuatro sujetos con padres o madres viudos, nueve con
padres separados o divorciados y veintisiete sujetos con padres casados o que viven
juntos (Tabla 1)
Tabla 1
Nmero de subjetos (porcentajes) en funcin del estado civil y el grupo- clase
Casados
3 ESO A
14 (66,66%)
3 ESO B
13 (68,42%)
Total
27 (67,5%)
Divor.
5 (23,89%)
4 (21,05%)
9 (22,5%)
Viud
2 (9,52%)
2 (10,53%)
4 (10%)
Total
21 (52,5%)
19 (47,5%)
40 (100%)
Instrumento
Seleccionamos para la recogida de datos laEscala Trait Meta- Mood Scale 24
(TMMS-24) (Salovey y Mayer, 1997) en su adaptacin al castellano (FernndezBerrocal, 2004) y en versin electrnica (2005) para evaluar el nivel de inteligencia
emocional de los sujetos. Dicha escala fue adaptada al castellano por FernndezBerrocal en 2004. Al realizar el anlisis factorial de componentes principales qued
reducido a 24 tems que se distribuyeron en 8 tems en cada uno de los factores: claridad
de sentimientos, reparacin emocional y atencin emocional (Fernndez-Berrocal et al.,
2004). Esta escala evala el metaconocimiento de los estados emocionales, las destrezas
con qu podemos ser conscientes de nuestras propias emociones as como de nuestra
capacidad para regularlas.
Tabla 2
Elementos del TMMS- 24
Atencin
Claredad
Reparacin
978-84-695-8363-0
1745
El cuestionario adopta el formato de las escalas tipo Likert con cinco opciones
de respuesta, que oscilan desde nunca o rar vez (1) hasta siempre o casi siempre (5).
Para corregir y obtener una puntuacin en cada uno de los factores, se tienen que sumar
los tems des del 1 hasta el 8 para el factor atencin emocional, los tems del 9 al 16
para el factor claredad emocional y del 17 al 24 para el factor reparacin de las
emociones.
Procedimiento
En primer lugar, se realizaron los trmites administrativos para poder realizar la
investigacin dentro del instituto y se solicitaron los consentimientos y autorizaciones
por parte del profesor tutor y de los alumnos de 3 de ESO para participar en el estudio.
Seguidamente, se hizo la aplicacin formal de la escala TMMS-24 para evaluar el nivel
de IE con dos grupos de 40 alumnos de un instituto pblico, con una previa explicacin
sobre la escala: cmo se tena que responder y qu significado tena cada uno de los
tems. A continuacin, cada uno de los alumnos de forma individual respondi a la
escala mediante soporte de papel y lpiz.
Para la variable estado civil, los alumnos nicamente tuvieron que marcar en el
test si sus padres estaban: separados/divorciados, padres viudos o casados/juntos. Esta
informacin se aadi previamente en el test ya que no constaba. Seguidamente, se
siguieron las instrucciones de correccin del test para hacer el estudio correlacional que
permite establecer una relacin entre el nivel de IE de cada uno de los alumnos y el
estado civil de sus padres. Se evaluaron cada una de las subescalas sumando cada una
de las respuestas para ver si el nivel era mejorable, adecuado o excelente. Se emple el
programa SPSS en su versin 18 donde se introdujeron los datos: estado civil y el nivel
de IE en cada una de las subescalas y de cada uno de los sujetos. Para el estado civil se
agruparon las respuestas de los alumnos con familia monoparental y los que tenan
padres divorciados para reducir el anlisis a dos grupos. Para hacer esta correlacin se
hizo a partir de coeficiente de correlacion Chi2 que permiti extraer las conclusiones
finales de la investigacin.
Resultados
Para el anlisis estadstico de los datos se utiliz el paquete estadstico PASW
Statistics 18 (SPSS Corp., 2009). Con el programa PASW se efectu el anlisis
correlacional de las variables (Chi2) donde se analizan las relaciones existentes entre el
estado civil de los padres y cada una de las subescalas del test.
978-84-695-8363-0
1746
Anlisis correlacional
Con la finalidad de detectar la relacin que existe entre la Inteligencia
Emocional y el Estado Civil de los padres, se ha trabajado con la correlacin Chi2 para
ver el nivel de significacin de cada una de las subescalas.
A mejorar
f %
Atencin
Casados
Divorciados/
Viudos
Claredad
Casados
Divorciados/
Viudos
5%
Tabla 3
Resultados del anlisis correlacional
Adecuada
Excelente
f %
f %
X2
4.36
21 52,5%
3 7,5%
4 10%
10 25%
7,5%
10 25%
10.54
13 32,5%
20%
1 2,5%
Casados
22,5%
7 17,5%
14 35%
5 12,5 %
p
.113
.005
.542
0%
5 12,5%
1.223
Regulacin
gl
2
3 7,5%
2 5%
Divorciados/
Viudos
Discusin
Investigaciones previas que han llevado a cabo la relacin entre Inteligencia
Emocional y estado civil de los padres han demostrado que realmente no existe una
978-84-695-8363-0
1747
relacin estadsticamente significativa entre estas dos variables (Cooper 1983, Moreno
1995 y Fraser 1987) aunque han dejado el campo abierto para posibles investigaciones
futuras por el hecho de no encontrar significatividad. Despus de desarrollar el estudio y
conocer los estudios llevados a cabo por estos autores, se concluye que no existe
relacin estadsticamente significativa entre el estado civil de los padres y el nivel de
Inteligencia Emocional de los nios. Este hecho demuestra que no por tener padres
separados, divorciados o viudos los nios deben tener un nivel de Inteligencia
Emocional bajo ni viceversa. Hay otros factores y circunstancias que pueden influir en
el desarrollo emocional de los sujetos. Estas ideas sobre otras posibles circunstancias
dejan abierta la investigacin para futuros estudios como por ejemplo el estudio de
Snchez, Rodrguez y Parrilla (2007) sobre la relacin entre la inteligencia emocional y
el rendimiento acadmico.
En el presente estudio realizado, nicamente se han mostrado una ligera relacin
estadsticamente significativa en el apartado de claridad en relacin al estado civil.
Aunque existe esa pequea relacin, no es suficientemente definitiva y concreta para
poder corroborar la hiptesis de investigacin. Despus de analizar los resultados se
pueden extraer dos conclusiones. La primera de ellas es que, por lo general, no se
producen relaciones ni positivas ni negativas entre el constructo IE y el estado civil de
los padres por lo que se puede deducir que no existe ningn tipo de relacin. La segunda
conclusin es que aparece una leve significatividad entre el subapartado claridad y el
estado civil que puede dar luz a posteriores investigaciones donde se puedan extraer
nuevos datos para encontrar relacin significativa entre ambas variables.
El hecho de que el presente estudio est basado en una muestra reducida de
alumnos hace que los resultados obtenidos solamente sean vlidos para la muestra
concreta de investigacin. Por tanto, no se pueden generalizar los resultados a otros
sujetos. Ser muy interesante que se realizara el mismo estudio pero con una muestra
mucho ms amplia, es decir, seleccionar todos los cuartos de primaria de diferentes
centros. Este estudio se puede unir a aquellos que cuestionan la existencia de la relacin
entre el nivel de inteligencia emocional de los nios y el estado civil de los padres para
corroborar lo que ellos ya explican, la no significatividad. Asimismo, y como se ha
comentado anteriormente, el estudio se ha dirigido a una poblacin con unas
caractersticas demogrficas particulares y una edad concreta, por tanto es
recomendable investigar las relaciones entre las diferentes variables con otras
poblaciones, edades o niveles de escolaridad.
Aunque hoy en da las evidencias en diferentes estudios (Cooper 1983, Moreno
1995) demuestran la no existencia de relacin entre las dos variables, se requiere de ms
estudios que permitan profundizar ms en este campo para evidenciar ms fuertemente
los resultados. Las aseveraciones ms usuales se han relacionado con el efecto y la
influencia de la IE en la vida de las personas, o bien, con las distintas reas en las que la
IE poda influir. As, el fomento de la IE ayudara a potenciar las relaciones con los
hijos (Shapiro, 1997; Kratz y Gottman, 1997; Elias, Tobias y Friedlander, 1999),
ayudara a mejorar nuestro trabajo (Cooper y Sawaf, 1997) o tendran efectos
beneficiosos en el contexto educativo, entre otros. El nico inconveniente fue que todas
estas afirmaciones no fueron avaladas por datos empricos contrastados que sistemtica
y rigurosamente demostrasen, por un lado, el grado explicativo de la IE y, por otro, el
papel real de sta en las distintas reas de la vida, en comparacin con otras
dimensiones del ser humano (p.e., inteligencia general, personalidad, caractersticas
sociodemogrficas, redes sociales, etc.) (Snchez, Rodrguez y Padilla, 2007).
978-84-695-8363-0
1748
Referencias
Anadn, O. (2006). Inteligencia emocional percibida y optimismo disposicional en
estudiantes
universitarios.
Disponible
en:
http://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=2783195&orden=178783&info
=link
Bar-On, R. (1997). The Emotional Quotient Inventory (EQ-I): technical manual.
Toronto: Multi- Health Systems.
Bisquerra, R. (2003). Educacin emocional y competencias bsicas para la vida. Revista
de Investigacin Educativa, 1(21), 7-43.
Block, L. y Block, J. (1980). The role of egocontrol and egoresilency in the organization
of behavior. En W. A. Collins (Ed.), Development of cognitive affectand social
relations. Minnesota symposium on child psychology (pp. 39-101). Hillsdale, NJ:
Erlbaum.
Burke, R.W. (2002). Social and emotional education in the classroom. Kappa Delta Pi
Record, 38(3), 108111.
Cooper, J. E. et al (1983). Self esteem and family cohesion: the childs perspective and
adjustement. Journal of Marriage and Use Eamily, febrero, 153-158.
Cooper, R. K. y Sawaf, A. (1997). Estrategia emocional para ejecutivos. Barcelona:
Martnez Roca.
Elias, M., Tobias, S. y Friedlander, B. (1999). Educar con inteligencia emocional.
Barcelona: Plaza y Jans.
978-84-695-8363-0
1749
978-84-695-8363-0
1750
Resumen
El trabajo es un estudio cientfico de corte cualitativo. Se recogi y analiz la
informacin con los responsables universitarios y el alumnado; el diseo fue
transversal; el esquema metodolgico sigui un orden: 1. Diseo de los instrumentos,
2. Recogida de informacin: la entrevista. 3. Tratamiento y procesamiento de los datos:
se elabor una tabla para reducir y analizar la informacin de manera inductiva. Los
datos se procesaron a travs del programa informtico MAXQDA 2007. Como muestra
se eligieron a los representantes de determinados servicios de las tres universidades
participantes en el proyecto (Huelva, Beja y Algarve) en los mbitos de las adicciones a
las drogas, a los nuevos medios tecnolgicos, en la prevencin y nivel de repercusin
de las enfermedades de transmisin sexual. Entre los servicios elegidos estn la Unidad
de Prevencin y Salud del tratamiento del tabaquismo, Servicio de Atencin
Universitaria, radio, televisin, Grupos de Investigacin y/o investigadores.
978-84-695-8363-0
1751
Introduccin
Se realiz un anlisis de las iniciativas y actuaciones que se llevaron a cabo en
las tres Instituciones Universitarias (Huelva, Algarve y Beja) en la prevencin de
riesgos para la salud de los estudiantes en los mbitos de las adicciones a las drogas y
nuevos medios tecnolgicos, as como a las enfermedades de transmisin sexual. Se
estudi su nivel de repercusin, se propusieron mejoras para el futuro y se puso en
marcha algunas iniciativas concretas de intervencin.
En los ltimos aos, se estn empezando a desarrollar algunos estudios que estn
incidiendo en el conocimiento de las adicciones de los universitarios a las drogas, a los
medios tecnolgicos y, en menor medida, al juego. Tambin se constatan estudios que
intentan conocer lo hbitos de los universitarios en el terreno de su sexualidad. Algunos
de estos estudios son:
- Proyecto Drog@ (Universidades de Huelva, Algarve e Instituto Politcnico de
Beja), con un estudio sobre hbitos de consumo realizado en 2006, dirigido por los
profesores de la Universidad de Huelva, Jos Ignacio Aguaded y Juan Manuel Mndez.
- Proyecto + Vida Drogas (Universidad de Huelva), con un estudio sobre hbitos de
consumo realizado en 2008 y dirigido por los profesores Aguaded y Mndez.
- El Proyecto VIVE (Universidades de Huelva, Algarve e Instituto Politcnico de
Beja), con un estudio transfronterizo sobre el grado de incidencia de las siguientes
situaciones de riesgo para la salud del alumnado universitario: adicciones a las drogas,
juegos de azar, medios tecnolgicos e Internet, as como las enfermedades de
transmisin sexual. Los investigadores principales de este proyecto son: Juan Manuel
Mndez (profesor de la Universidad de Huelva), Manuel Pedro Gonalves (Instituto
Politcnico Superior de Beja) y Amadeu Cardoso (Universidade do Algarve).
- Estudio sobre la prctica del botelln realizado en la Universidad de Valencia por la
profesora Maite Corts.
- Estudio dirigido por la profesora Cristina Botella realizado en la Universidad Jaume I
de Castelln sobre el juego patolgico.
- Estudio sobre la adiccin a Internet y al mvil realizado por los profesores Snchez
Carbonell, Beranuy, Castelln, Chamarro y Oberst de la Universidad Ramn Llull.
- Estudio sobre Sexualidad y Prevencin frente al VIH en jvenes de las Universidades
de Huelva y Algarve, realizado por las profesoras Cristina Nunes, Ana Teresa Martins y
Alicia Muoz.
La investigacin Estudio Transfronterizo sobre comportamientos de riesgo para
la salud en la Enseanza Superior dio continuidad al Proyecto I2TEP (Investigacin y
Transferencia Tecnolgica Espaa-Portugal) y al Subproyecto VIVE2 por lo que ampla
la Red de Investigacin del Suroeste de Europa (Proyecto RISE). En este estudio,
perteneciente al proyecto I2TEP, se investig sobre el anlisis de materiales, recursos y
978-84-695-8363-0
1752
Mtodo
El mtodo que se utiliza en esta investigacin responde al modelo de
investigacin por encuesta. Segn Buenda (1997: 120), el mtodo por encuesta es
capaz de dar respuesta a problemas tanto en trminos descriptivos como de relacin de
variables. Se ha recurrido a la encuesta como medio de conocer y describir la realidad
que se investiga. El instrumento utilizado fue la entrevista donde se compagin un
esquema base, bien fundado, con perfiles diseados ad hoc, es decir, se disearon una
serie de protocolos para entrevistar a los responsables de los diferentes servicios de la
978-84-695-8363-0
1753
Resultados
Todas las entrevistas realizadas tanto en la Universidad de Huelva (Espaa)
como en la del Algarve y Beja (Portugal) se transcribieron y se analizaron a travs de
una tabla de doble entrada, en la cual se establecieron las dimensiones, categoras,
cdigo, nmero, descripcin y ejemplos de entrevistas.
Tabla 1
Ejemplo de tabla de categoras de la investigacin
DIMENSIN
CATEGORAS
ADICCIONES
PREVENCIN EN
UNIVERSITARIOS
DE HUELVA, BEJA,
ALGARVE
CDIGO
APU
NMERO
DESCRIPCIN
Fragmentos sobre los
diferentes programas,
proyectos, medidas y
actuaciones que se estn
llevando a cabo para
prevenir todo tipo de
adicciones en los
estudiantes de la
Universidad de Huelva.
978-84-695-8363-0
1754
Beja y Algarve (Portugal), coinciden en la mayora de los recursos que establecen las
universidades y en las acciones de prevencin. Coinciden en programas: Programa
StopDrog@s, t decides, Proyecto VIVE I, Proyecto VIVE2; en seminarios, encuentros.
Huelva, a diferencia de las Universidades portuguesas, cuenta con un Mter en
Educacin y Ciencias de la Salud, curso de teleformacin de lderes universitarios para
prevencin del consumo de drogas, curso sobre la intervencin en conductas de riesgo,
un curso de libre configuracin sobre la sexualidad y el gnero como intervencin
educativa. En cuanto a las acciones de prevencin, las tres instituciones cuentan con
campaas de prevencin sobre consumo de sustancias adictivas, recursos telemticos
para informar sobre efectos de las sustancias adictivas. Las Universidades de Beja y la
del Algarve realizan campaas de prevencin sobre el consumo de tabaco, campaas de
prevencin en enfermedades de transmisin sexual: colocacin de mquinas
expendedoras de preservativos en sus campus universitarios.
Las frecuencias en la que coinciden las tres universidades son:
Tabla 2
Tabla de frecuencias de las variables cualitativas
DIMENSIN
NMERO
CATEGORA
CDIGO
NMERO
PREVENCIN EN UNIVERSITARIOS
APU
51
ACU
MENSAJE DESDE TV DE LA
UNIVERSIDAD
ALMT
ALMR
PROYECTO
DPR
33
MEDIDAS DE ACTUACIN
DMA
28
GRADO DE REPERCUSIN
DGR
13
PROGRAMAS DE TV DE LA
UNIVERSIDAD
DPT
DSU
ADICCIONES
CONSUMO DE
ALCOHOL
MEDIOS
TECNOLGICOS,
59
DROGAS
EDUCACIN
PARA LA
SEXUALIDAD
TOTAL
81
SENSIBILIZACIN DE LA POBLACIN
UNIVERSITARIA EN LO REFERENTE A
DROGAS
10
PROYECTOS
11
INICIATIVAS EN LA UNIVERSIDAD
EIU
36
12
OBJETIVOS PLANTEADOS EN UN
FUTURO SOBRE LA PREVENCIN DE
ENFERMEDADES DE TRANSMISIN
SEXUAL
EOP
13
PROGRAMAS EN LA TV DE LA
UNIVERSIDAD
EPT
14
PROGRAMAS EN LA RADIO DE LA
UNIVERSIDAD
EPA
15
RECOMENDACIONES PARA
CONCIENCIAR DE LOS RIESGOS DE
LAS ETS
ERI
16
16
PROYECTOS
MPR
17
EPR
35
95
45
DIMENSIN
RECURSOS E
INTERNET
PROGRAMAS DE
CARCTER
INFORMATIVO
SOBRE
PREVENCIN
UNIDAD DE
SALUD
CATEGORA
CDIGO
NMERO
17
PROGRAMAS EN LA RADIO DE LA
UNIVERSIDAD
MPD
18
MAD
26
19
PCA
26
20
COLABORACIN DE INSTITUCIONES
PCI
36
21
PCP
22
ACTUACIONES CONCRETAS
UAC
10
23
UCO
24
UEG
25
EXPERIENCIA DE LA UNIDAD DE
SALUD
UEX
26
MATERIALES ELABORADOS
UME
27
UPH
28
UTA
11
UVG
LAN
30
SERVICIO DE
PREVENCIN
DEL
TABAQUISMO
1755
NMERO
29
SERVICI DE
PREVENCIN DE
RIESGOS
LABORALES
978-84-695-8363-0
VALORACIN GLOBAL DE LA
EXPERIENCIA FRENTE A LA UNIDAD
DE TABAQUISMO y/o UNIDAD DE
SALUD
ASPECTOS NECESARIOS PARA
CAMBIAR LA APTITUD, LOS MALOS
HBITOS DE LA POBLACIN
UNIVERSITARIA
31
LEA
32
LME
33
LRA
34
LRU
35
LTA
36
POBLACIN DE ESTUDIANTES
UNIVERSITARIOS
SPU
37
SEGUIMIENTO DE EVALUACIN DE
REPERCUSIONES
SER
38
SMI
39
SSE
TOTAL
71
54
DIMENSIN
TABAQUISMO
UNIVERSIDAD
DE HUELVA
UNIVERSIDAD
DE BEJA
UNIVERSIDAD
DEL ALGARVE
978-84-695-8363-0
1756
NMERO
CATEGORA
CDIGO
NMERO
40
SMA
41
SAA
42
SEC
43
TCT
44
TCR
45
RECURSOS TECNOLGICOS
UTILIZADOS PARA LA PREVENCIN Y
LOS RIESGOS DEL TABAQUISMO
TRT
46
TPC
47
PROGRAMAS DE RADIO
TPR
48
TGI
49
HEU
50
HMI
51
HMR
52
PREVENCIN DE ADICCIN EN
UNIVERSITARIOS DE HUELVA
HPA
53
BEU
19
54
BMI
29
55
BMR
22
56
PREVENCIN DE ADICCIN EN
UNIVERSITARIOS DE BEJA
BPA
10
57
UAEU
58
UAMI
18
59
UAMR
60
PREVENCIN DE ADICCIN EN
UNIVERSITARIOS DEL ALGARVE
UAPA
TOTAL
14
17
80
24
978-84-695-8363-0
1757
Discusin e implicaciones
La Universidad de Huelva (Espaa), junto con la del Algarve y el Instituto
Politcnico de Beja (Portugal), intentan mejorar en sus materiales y en la oferta de
actividades de formacin para prevenir determinados riesgos en los universitarios. Las
tres instituciones, en su conjunto y por separado, han establecido sus deficiencias en
este tema e intentado concienciar a los responsables para obtener mejoras en un futuro
prximo. A la Universidad de Huelva le falta mejoras en la prevencin de enfermedades
de transmisin sexual, mientras que a las dos de Portugal tienen que mejorar los riesgos
laborales dentro de cada institucin. Triangulando todas las entrevistas con los grupos
de discusin, se llega a la conclusin de que el alumnado entrevistado coincide en la
falta de campaas de informacin, en la oferta de cursos, en la realizacin de talleres
para concienciar de los riesgos, y en actividades transversales de determinadas materias
para la resolucin de los posibles riesgos.
Referencias
Becoa, E. (1996). La ludopata. Madrid: Aguilar
Buenda, L. (1997). La investigacin por encuesta. En L. Buenda, M.P. Cols y F.
Hernndez, Mtodos de Investigacin en Psicopedagoga (pp. 119-155). Madrid: McGraw-Hill.
978-84-695-8363-0
1758
Engeland, E. (2002). Effects of first-aid training in junior high schools. Injury Control
and Safety Promotion 9, 99-106.
Heinz, H. y Beat, H. (2003). Promoting safety a component in health promotion in
primary and secondary schools-. In Injury Control and Safety Promotion, 10, 165171.
Jimnez, A., Belmonte, A., Marqueta, A., Gargallo, P. y Nern, I. (2009). Consumo de
drogas en estudiantes universitarios de primer curso. Adicciones, 21(1), 21-28.
Lameiras, M. y Failde, J.M. (1997). Sexualidad y salud en jvenes universitarios/as:
actitudes, actividad sexual y percepcin de riesgo de la transmisin heterosexual del
VIH. Anal. Modif. Conducta, 23, 27-61
Nilsen (2004). What makes community-based injury prevetion work? In search of
evidence of effectiveness. Injury Prevetion, 10, 268-274.
Villoria, C. (1999). Estudio piloto sobre la percepcin social de los juegos de azar entre
los universitarios: factores ambientales en el juego patolgico. Psicologa.com, 3(1).
Recuperado de http://www.psiquiatra.com/psicologia/vol3 n1
Young, K. (1998b). Internet Addiction: The emergence of as new clinical disorder.
Cyberpsychology y Behavior, 1, 237-244.
978-84-695-8363-0
1759
Resumen
El medio natural y sociocultural propio de las reas rurales se ha convertido en un
espacio de consumo, carencias y necesidades extremas. El estudio pretende una
aproximacin a las iniciativas de Educacin Ambiental desarrolladas en reas rurales
ligadas a Espacios Naturales Protegidos y cuyo propsito es contribuir al Desarrollo
Rural Sostenible. Analizar como dichas iniciativas pueden contribuir a la
revalorizacin del medio rural y a la resolucin de sus problemticas ambientales es el
objeto del estudio. Para alcanzar sus principales objetivos se ha puesto en marcha una
investigacin de carcter exploratorio contextualizada en Libana, Cantabria, comarca
vinculada al Parque Nacional de Picos de Europa. Las conclusiones del estudio nos
llevan a plantear que es posible conservar y revalorizar el medio rural, proteger y
restaurar el equilibrio entre el ser humano y la Naturaleza bajo unos principios de
sostenibilidad y utilizando como herramienta gestora en todo el proceso la Educacin
Ambiental.
978-84-695-8363-0
1760
Introduccin
El medio rural, reflejo del estrecho vnculo entre naturaleza y ser humano, lleva
padeciendo desde hace ya muchas dcadas el maltrato de un sistema socioeconmico
basado en la explotacin del medio ambiente. El medio natural y sociocultural que se
muestra en todo su esplendor en zonas rurales est en declive; la diversificacin
econmica, el movimiento migratorio, la insuficiencia de los servicios sociales, la
sobreexplotacin de los recursos naturales, han convertido al medio rural en un
espacio de consumo, de carencias y de necesidades extremas (Regidor, J., 2008).
Conscientes de la prdida que supone el deterioro del medio rural y el espacio
natural en que se encuentra, se comienza a hablar en los ltimos aos de un nuevo
modelo de desarrollo socioeconmico, el Desarrollo Rural Sostenible (DRS), que
pretende por un lado la conservacin de la naturaleza y por otro facilitar el
empoderamiento de sus pobladores para as poder alcanzar cierta calidad de vida en
equilibrio con el medio natural cercano (Martnez de Anguita, 2006).
Surgen gran cantidad de normativas, se celebran multitud de congresos y
encuentros, se ponen en marcha numerosos movimientos sociales, todo ello fruto de
esta nueva corriente sociopoltica y ambiental que demanda y defiende un crecimiento
econmico sostenido, sostenible y socialmente equilibrado (Navarro Luna, 2007: 151).
Ejemplos de esto son la Poltica Agraria Comunitaria o las diferentes Conferencias de
las Naciones Unidas sobre Medio Ambiente
Para revalorizar, conservar y proteger el medio
diversos factores como es el territorio, su poblacin,
particulares de su contexto para as poder adaptar
desarrollo rural y de proteccin del espacio natural
comunidad (Murga, 2006).
978-84-695-8363-0
1761
Objetivos de la Investigacin
El estudio persigue principalmente dos cosas, por un lado caracterizar la
relacin existente entre EA y DRS en zonas vinculadas a Espacios Naturales Protegidos
(ENPs) y por otro analizar la pertinencia, entendida como suficiencia, idoneidad y
adecuacin, de las iniciativas de EA desarrolladas en el contexto rural de Libana y el
Parque Nacional de Picos de Europa.
A travs de la investigacin se ha pretendido analizar desde una perspectiva
normativa cmo la EA puede contribuir al DRS en comunidades vinculadas a ENPs; as
mismo, ha tenido lugar una exploracin sobre los conocimientos, opiniones y
percepciones de los problemas ambientales que afectan al contexto de estudio; para
finalmente caracterizar la contribucin que las iniciativas de EA desarrolladas en
Libana tienen en la resolucin de dichas problemticas ambientales y en el Desarrollo
Sostenible de la comunidad destinataria.
978-84-695-8363-0
1762
Mtodo
Enfoque metodolgico
El estudio ha seguido una perspectiva metodolgica descriptiva y exploratoria.
La contextualizacin de este estudio en la comarca de Libana y en un Parque Nacional
concreto ha ubicado esta investigacin en el enfoque del Estudio de Caso.
El Estudio de Caso es utilizado para comprender en profundidad la realidad
social y educativa (Bisquerra, 2012), en nuestro caso ha servido para conocer y analizar
cmo se aborda la EA en el contexto caso y como contribuye al DRS.
Las fuentes de informacin que han sido tomadas como referencia durante todo
el proceso investigador han sido mltiples. Se han empleado diferentes documentos
normativos referentes a Desarrollo Sostenible en el medio rural, ENPs, que regulan
las iniciativas que se desarrollan en dichos mbitos as como ofrecen las directrices que
deben guiarlas. La informacin extrada tanto de estos documentos reguladores como la
extrada de los colectivos implicados en la investigacin, alumnado y profesorado del
I.E.S. Jess de Monasterio y diversos agentes sociales presentes en Libana
relacionados con la EA y el Desarrollo Rural, han sido de vital importancia para poder
triangular todos los datos y extraer unas conclusiones coherentes a los objetivos
marcados inicialmente.
Las tcnicas, estrategias y procedimientos de recogida y anlisis de informacin
han combinado por una lado tcnicas de encuesta directa, para obtener informacin de
primera mano, a travs de Cuestionarios y Entrevistas, cuyos participantes han sido,
respectivamente, el alumnado y el profesorado y los agentes sociales; y por otro tcnicas
indirectas que han consistido en la lectura de los documentos normativos referentes al
tema de estudio.
Se han definido una serie de dimensiones y subdimensiones de anlisis del
contenido de las fuentes documentales, tanto de forma deductiva como inductiva. Las
dimensiones bsicas de anlisis son Educacin Ambiental, Desarrollo Rural Sostenible
y Espacios Naturales Protegidos. De ellas partirn las subdimensiones que van desde
problemticas ambientales a lneas de actuacin y participacin.
Con respecto a las tcnicas de encuesta, a travs de las entrevistas se ha podido
acceder a las opiniones personales de diversos agentes sociales presentes que trabajan la
EA en el contexto de Libana y el Parque Nacional de Picos de Europa: un tcnico de
Agenda 21, el director de una empresa de ecoturismo y EA y un gua del Parque
Nacional. Las entrevistas han sido semiestructuradas con respuesta abierta, permitiendo
as que el entrevistado responda libremente, aportando la informacin que considere
destacable; y han girado en torno a una serie de temticas que se han convertido al
mismo tiempo en dimensiones de anlisis de carcter cualitativo.
Se han diseado dos modelos de cuestionarios, uno adaptado al alumnado del
centro escolar y otro al profesorado. Sobre la informacin aportada en estos
cuestionarios se ha realizado un anlisis estadstico descriptivo bsico. Los anlisis se
han realizado con la ayuda del programa SPSS.
978-84-695-8363-0
1763
Resultados
Sobre las aportaciones de la normativa vigente al tema de estudio
La normativa seleccionada est directamente relacionada con el medio rural y
los tres pilares sobre los que gira el trabajo: Educacin Ambiental, Desarrollo Rural
Sostenible y Espacios Naturales Protegidos. Estas tres dimensiones fueron el primer
tamiz para escoger los documentos reguladores clasificados para su anlisis en funcin
de su jurisprudencia nacional, autonmica o local. Algunos de los documentos
normativos de referencia son:
La Ley 45/2007, del 13 de diciembre, del Patrimonio Natural y de la
Biodiversidad, en ella se refleja la necesidad de conservar el medio natural y social y da
unas directrices para su aprovechamiento sostenible. Adems, fundamenta que es
imprescindible fomentar programas de educacin, formacin e informacin que
busquen proteger el espacio natural y que estn enfocados a los usuarios del territorio,
promoviendo un desarrollo compatible con la conservacin.
La Ley 45/ 2007, de 13 de diciembre, para el Desarrollo Sostenible del medio
rural, que propone una serie de medidas para poder avanzar hacia un desarrollo
econmico compatible con el equilibrio del medio natural y social, introduciendo as el
modelo de Desarrollo Rural Sostenible. La Educacin Ambiental se presenta entre las
medidas que propone para favorecer la consecucin de un modelo de DRS, plantea la
EA como punto de partida para la conservacin de la naturaleza y la adecuada gestin
de los recursos naturales y culturales
La Ley 4/2006, de 19 de Mayo, de Conservacin de la Naturaleza de Cantabria,
entre cuyos principios destaca fomentar la contribucin a un Desarrollo
Socioeconmico Sostenible, en especial en los municipios que tienen parte de su
territorio en ENP y promover la formacin e investigacin respecto a la conservacin
y proteccin de la naturaleza. Esta ley dedica especial atencin a la Educacin
Ambiental y destaca la necesidad de elaborar una estrategia regional de EA que
promueva la conservacin del medio ambiente de la que participen los sectores
interesados y desarrollar programas especficos centrados en la divulgacin de los
valores naturales de los ENP.
Los documentos reguladores presentados, aparte de avalar que se desarrollen
iniciativas para mejorar la situacin que atraviesa el medio rural, tambin aportan las
herramientas necesarias para poder alcanzar un verdadero Desarrollo Rural Sostenible y
justifican el uso de la Educacin Ambiental para conseguir su propsito.
978-84-695-8363-0
1764
978-84-695-8363-0
1765
Discusin
Los documentos normativos analizados avalan y potencian iniciativas que
favorecen el desarrollo rural y la conservacin y proteccin del medio social y natural.
En todos ellos se propone la Educacin Ambiental como mecanismo para alcanzar un
desarrollo sostenible.
Para mejorar la situacin ambiental del territorio de Libana, es indispensable
capacitar y formar a las personas que all habitan, dotndolas de herramientas eficaces y
suficientes para gestionar su territorio.
Destacar la necesidad de difundir adecuadamente las iniciativas de EA que se
desarrollen y facilitar el acceso y colaboracin entre la poblacin, el centro escolar y los
diversos agentes sociales que trabajan la EA y el DRS presentes en el medio. Es
significativo que la percepcin de los jvenes sobre las problemticas ambientales es, en
general, escasa, lo que hace necesario promover actividades que permitan dotarlos de la
informacin y concienciacin necesaria para proteger y conservar su medio.
Toda iniciativa proambiental que se desarrolle en Libana debera constar de un
apartado de sensibilizacin y concienciacin ambiental, que se trabaje desde la EA, ya
que es la forma de aportar soluciones que no solo se materializarn en forma de
infraestructuras o limitaciones de uso, sino que tendrn sentido en la cabeza de cada
poblador y as lucharn con ms fuerza por conservar su territorio y fomentar su
desarrollo econmico, pero bajo unos principios de sostenibilidad.
Podemos afirmar que la EA contribuye de diferentes modos al Desarrollo Rural
Sostenible, por un lado concienciando ambientalmente, por otro conservando y
revalorizando el medio ambiente rural, dando el conocimiento necesario para una
gestin sostenible de los recursos y usos del territorio y como fuente de empleo.
Para apostar por un modelo de DRS es necesario invertir en Educacin, en
formacin para los agentes sociales del medio, en iniciativas de Educacin Ambiental
que estn integradas en la comunidad, con las que se potencien actitudes y valores
comprometidos con la conservacin y revalorizacin del medio rural, capacitando a los
pobladores para actuar individual y colectivamente en la resolucin de las problemticas
ambientales que afectan a su contexto.
978-84-695-8363-0
1766
Referencias
Bisquerra Alzina, R. (Coord.) (2004). Metodologa de la investigacin educativa.
Madrid: La Muralla.
Calvo, S., y Gonzlez, M. (1999). Libro Blanco de la Educacin Ambiental en Espaa.
Ministerio de Medio Ambiente. Madrid.
Calvo, S y Gutirrez Prez, J. (2007). El espejismo de la educacin ambiental. Madrid:
Morata.
Caada Sanz, J. (editor) (2007). El futuro del mundo rural. Madrid: Sntesis.
Diego Liao, C. (2007). Los espacios naturales protegidos. Matar: Davinci.
Mrquez Domnguez, D y Champerier, Y. (2002). Nuevos horizontes en el Desarrollo
Rural. Madrid: AKAL.
Martnez de Anguita, P. (2006). Desarrollo Rural Sostenible. Madrid: McGraw-Hill
Interamericana.
Murga, M.A. (2006). Desarrollo Local y Agenda 21: una visin social y educativa.
Madrid: Pearson Educacin.
Novo, M. (2003). La educacin ambiental. Bases ticas, conceptuales y metodolgicas.
Madrid: Universitas.
Pozo Llorente, T., Rodrguez Sabiote, C. y Gutirrez Prez, J. (2008). Enfoque
metodolgico, fases y criterios de calidad de la investigacin. En Cabrerra Prez,
L. (Coord.) (2008) Integracin cultural y social de inmigrantes
latinoamericanos: Inquietudes y sugerencias para polticas de cambio, pg.1955. Madrid: Universitas.
Regidor, J. (Coord.)(2008). Desarrollo Rural Sostenible: Un nuevo desafo. Madrid:
Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentacin.
Sandn, M. P. (2003). Investigacin cualitativa en educacin. Fundamentos y
tradiciones. Madrid: McGraw Hill.
Sanz Caada, J. (Editor) (2007). El futuro del mundo rural. Madrid: Sntesis.
Rodrguez, C., Pozo Llorente, M.T. y Gutirrez Prez, J. (2006). La triangulacin
analtica como recurso para la validacin de estudios de encuesta recurrentes e
investigaciones de rplica en Educacin Superior. En Revista Electrnica de
Investigacin
y
Evaluacin
Educativa
RELIEVE
http://www.uv.es/RELIEVE/v12n2/R.
978-84-695-8363-0
1767
Resumen
Se presenta una sntesis de los esfuerzos realizados por el Instituto de Investigacin en
Educacin de la Universidad de Costa Rica en la ltima dcada. Se indica cmo los
planes estratgicos han contribuido a definir su desarrollo. Se presentan brevemente
algunas referencias sobre la evolucin de la investigacin educativa y los estudios para
Costa Rica. Para las autoras, los logros obtenidos por el INIE son posibles por
pertenecer a una institucin de educacin superior pblica que cuenta con un personal
de calidad, comprometido con la realidad socio-educativo del pas en el mandato de la
Universidad. Se finaliza con algunos desafos y retos para el Instituto.
Introduccin
El Instituto de Investigacin en Educacin (INIE) 65 de Facultad de Educacin de
la Universidad de Costa Rica (UCR) es una unidad acadmica que tiene como tarea
principal impulsar la investigacin educativa interdisciplinaria y transdisciplinaria.
Entre sus principales intereses se encuentra contribuir al mejoramiento del sistema
educativo costarricense, as como a la academia, por medio de la cooperacin e
investigacin en el mbito nacional e internacional.
El INIE para el 2010 cumpli sus treinta aos y se considera una instancia de
obligada referencia. Su trayectoria ha sido posible ya que est en el marco de la
Universidad de Costa Rica, que es una institucin pblica de educacin superior de
calidad, cuyo trabajo se vincula con la docencia, la investigacin y la accin social.
Tal como lo expresa el Estatuto Orgnico:
Artculo 1: La Universidad de Costa Rica es una institucin de educacin
superior y cultura, autnoma constitucionalmente y democrtica, constituida por
una comunidad de profesores y profesoras, estudiantes, funcionarias y
funcionarios administrativos, dedicada a la enseanza, la investigacin, la accin
social, el estudio, la meditacin, la creacin artstica y la difusin del
conocimiento.
64
65
978-84-695-8363-0
1768
En este marco de accin, los recursos financieros que son de orden pblico
permiten realizar investigaciones en profundidad y conformar equipos de trabajo que
beneficien con conocimientos y experiencias tanto a la educacin nacional como a la
regin centroamericana66.
El presente trabajo presenta una reflexin de cmo el INIE ha venido
enfrentando los retos y desafos para responder a las complejas problemticas
educativas actuales, en el marco de los profundos cambios sociales y econmicos
sufridos en las ltimas dcadas.
Aunque el pas concibe como un valor fundamental el derecho a la educacin y
apuesta por un sistema educativo formal y pblico de calidad, ste no se encuentra
exento de problemticas y contradicciones de larga data y que se conjuntan con
circunstancias particulares del contexto social actual. Los cambios en las dinmicas de
relacin social marcan para Jimnez, Luengo y Tabener (2009) nuevas alternativas de
desarrollo y relacin. A su vez se producen en medio de una sociedad que sufre
procesos de desigualdad social y econmica cuyas condiciones impactan de manera
directa en la realidad educativa y la convivencia social.
La formacin de una sociedad tecnolgica avanzada est configurando
nuevos criterios organizativos, nuevas formas de trabajo y de produccin
flexible y fragmentada un nuevo papel de Estado dando lugar a unas lgicas
distintas de organizacin social. Sin embargo ests manifestaciones estn
generando tambin diferentes formas de desigualdad, pobreza y vulnerabilidad
social (Jimnez, Luengo y Tabener, 2009, pp. 19)
Acorde con el texto sealado, se trata de una sociedad que vive cambios
climticos y ambientales bajo condiciones de gran incertidumbre. Este aspecto se une a
las afectaciones de las polticas neoliberales influenciadas por la geopoltica mundial y
los entes transnacionales. Hallak (1999) define la globalizacin como el resultado de la
integracin de los sectores econmicos y financieros a nivel mundial, lo que hace que
existan poderes paralelos a los de los Estados Nacionales cuyo presin ha ido
debilitando a los gobiernos y sobre todo a los proyectos de sociedad que se han
sustentado. De igual manera, las universidades pblicas estn siendo presionadas para
que se concentren en responder al mercado, tal como lo expone De Sousa Santos
(2005).
Estas influencias marcan el mundo de la vida cotidiana de las persona que
poblamos el mundo, en un interjuego de fuerzas entre las polticas pblicas internas y
las presiones de orden economicista que responden a una organizacin e ideologa
dominante, que estn marcados por los intereses capitalistas y las reglas del mercado.
La educacin se ha convertido en un valor tanto axiolgico, como una mercanca
que se puede comercializar para convertirse en un jugoso negocio donde la relacin se
centra en responder a las necesidades del cliente. A la educacin tambin se le ha
definido como un factor de desarrollo social, concebido como un mecanismo ptimo de
formacin y desarrollo humano. Desde esta doble condicin la educacin (mercanca y
66
978-84-695-8363-0
1769
Derecho Humano) se transforma en una accin controversial. Como ejemplo, estn los
procesos de negociacin que se realiza entre el estado costarricense y las universidades
pblicas para definir el financiamiento de la educacin superior (FEES 2011-2015,
Gonzlez, 2010).
En este contexto, el Instituto de Investigacin en Educacin consciente de los
principios que orientan el quehacer de la Universidad de Costa Rica, reconoce en la
educacin un medio para el desarrollo humano y una prctica que involucra
prcticamente todos los espacios de la vida humana. Nuestro Estatuto Orgnico es claro
con respecto a la responsabilidad con la sociedad costarricense:
Artculo 3: La Universidad de Costa Rica
transformaciones que la sociedad necesita para
mediante una poltica dirigida a la consecucin
equidad, del desarrollo integral, de la libertad plena
de nuestro pueblo.
Los Derechos Humanos siguen siendo inspiradores de las tareas que se realizan
bajo la conviccin y la defensa no solo de los derechos individuales, sino tambin de los
derechos econmicos, ambientales, sociales y culturales. Por esta razn el INIE tiene
entre sus principios apoyar la construccin de una sociedad solidaria, justa y equitativa.
De Sousa Santos (2005) plantea la necesidad de que las universidades pblicas
den respuesta a los embates del neoliberalismo y entre sus propuestas est el observar la
escuela y trabajar conjuntamente con los involucrados en el sistema educativo pblico.
Desde este marco el Instituto tiene como una de sus fortalezas el foco de atencin hacia
el sistema educativo costarricense. Ello ha generado una serie de lneas de trabajo
abriendo campos muy diversos de investigacin, a pesar de que el INIE es Unidad
Acadmica que cuenta con pocos recursos financieros. Los trabajos sistemticos han
sido posibles por ser parte de una universidad pblica y contar con un grupo humano
comprometido.
Las investigaciones son motivadas por preocupaciones de las y los
investigadores, cuyas preguntas parten de la realidad educativa del pas. En esta
dinmica se han ido consolidando sinergias y articulaciones con: instituciones pblicas,
organizaciones no gubernamentales y ocasionalmente entidades privadas. Sin estas
alianzas el INIE perdera de vista su capacidad de colaboracin y la posibilidad de
incidir directamente en el campo que le compete.
Las profesoras y profesores que realizan la investigacin cuentan con perodos
de tiempo de mediano plazo generando investigaciones en profundidad. Como poltica
de la Universidad se tiene que complementar la carga acadmica docente con la
docencia.
Los trabajos de investigacin responden a metodologas diversas, con un nfasis
en las investigaciones aplicadas versus la bsica. Se encuentran trabajos de
investigacin-accin que propician impulsar cambios desde las personas involucradas.
Uno de los aspectos donde hemos venido trabajando, como una poltica interna
del Instituto, es la divulgacin de los resultados de investigacin, por tal motivo nos
dimos a la tarea de impulsar la creacin de la revista electrnica: Actualidades
978-84-695-8363-0
1770
Investigacin educativa
El sistema educativo costarricense tiene gran cantidad de aristas y posibilidades
de investigacin, las cuales suelen responder a problemticas especficas. De igual
manera las investigaciones presentan diferentes posiciones tericas y metodolgicas. La
Escuela como institucin esta ubicada en un espacio y tiempo determinado y coexiste
con otros sistemas educativos no formales, tales como la crianza en la convivencia
familiar, comunitaria y con los grupos de padres, as como con los medios de
comunicacin social y el mundo del trabajo. Dichos espacios responden al tipo de
sociedad y a los intereses de los grupos de poder del pas que estn influenciados por el
sistema econmico, que se enmarca en condiciones de desigualdad y pobreza, que el
Estado de la Regin Centroamericana (2008) lo ha expuesto.
Las universidades pblicas, desde el campo de la formacin docente as como
desde la produccin cientfica, se convierten en las instituciones que vienen aportando a
la investigacin socio-educativa del sistema educativo nacional. La divulgacin de los
resultados y los hallazgos suelen ser encontrados en diversos documentos (tesis,
informes y otros), los cuales no siempre tiene una difusin amplia. Encontramos
publicaciones en las revistas especializadas y en libros, materiales didcticos y
documentos oficiales. Evidentemente, los medios electrnicos y el acceso gratuito es de
fundamental importancia para conocerlos.
67
http://revista.inie.ucr.ac.cr/
Universidad Nacional (UNA), Universidad Estatal a Distancia (UNED), Instituto Tecnolgico de Costa
Rica (TEC) y la Universidad de Costa Rica (UCR).
69
Organizacin adscrita a la Comisin Nacional de Rectores de las Universidades pblicas del pas.
70
http://publicaciones.inie.ucr.ac.cr/
68
978-84-695-8363-0
1771
Es importante indicar cmo en los ltimos aos hay instancias que han venido
contribuyendo con investigaciones a la realidad educativa del pas, como son:
Los informes del Estado de la Nacin, as como las versiones sobre los Estados de la
Educacin71.
Los diferentes proyectos de investigacin que se han venido haciendo desde las tesis
y trabajos finales de graduacin del grado y del posgrado en las universidades del
pas.
71
978-84-695-8363-0
1772
1980, pero tal como se ha expuesto en este momento no es la nica entidad que
contribuye en el campo educativo.
Es conocido que la investigacin educativa proviene de tradiciones retomadas de
la psicologa, sociologa, antropologa y la filosofa creando un trabajo de corte
interdisciplinario. Esto ha sido un reto permanente desde su nacimiento, mantener y
conformar grupos de investigacin interdisciplinarios.
La creacin del Instituto de Investigacin en Educacin en el ao 1980, adscrito
a la Facultad de Educacin es quiz la instancia ms importante que de manera explcita
estimula la investigacin. Esta Unidad Acadmica naci con el nombre de Instituto de
Investigacin para el Mejoramiento de la Educacin Costarricense (IIMEC) y parte de
los recursos humanos provenan de la Universidad pero tambin del Ministerio de
Educacin Pblica.
El doctor Juan Manuel Esquivel, investigador pensionado y exdirector (2010),
recuerda que el Instituto naci con tres proyectos de investigacin y con personal
adscrito de la Facultad de Educacin, con la promesa de apoyo presupuestario del
Ministerio de Educacin Pblica. Los proyectos de esa poca buscaron conocer lo que
aconteca en la educacin costarricense76 y durante su presentacin se pregunt qu
tanto habrn cambiado los problemas educativos reportados en ese tiempo en la
actualidad (2010)?
La vinculacin en los aos ochenta con el Ministerio de Educacin Pblica
(MEP) permiti que el IIMEC77, hoy INIE, hiciera ms visible su contribucin por
medio de la elaboracin de las pruebas bachillerato para la enseanza secundaria. Esta
tarea respondi al inters por contribuir con una educacin de calidad.
La doctora Natalia Campos78, investigadora pensionada y exdirectora del
Instituto, coment en la celebracin del XXX Aniversario del INIE (2010) que en la
dcada de los 90 hubo dos nfasis importantes: la investigacin en el aula y la accin
social, aspectos que se han mantenido como una fuerte tradicin.
Para los aos noventa, el estrecho vnculo entre el MEP y el IIMEC en relacin
con la pruebas de bachillerato cambi, solicitando en ese momento otro tipo de
colaboraciones, como la edicin de los libros especializados para el sistema educativo
formal Serie Hacia el Siglo XXI (Montero, 2009). Es en esta dcada donde se
fortalece la investigacin de aula y el trabajo desde la perspectiva cualitativa abriendo la
oportunidad para realizar trabajos desde una perspectiva del micro anlisis y lo local. A
su vez existi la preocupacin que destaca otra exdirectora, la cual plantea que se
intent buscar un equilibrio entre la metodologa cuantitativa y cualitativa, pues exista
cierta tensin entre ambos grupos de investigacin (Montero, 2009 pp.26).
Para la dcada del ao 2000, el Instituto realiz una revisin profunda de su
actuar y durante la dcada se han elaborado dos planes estratgicos, llevando a realizar
76
978-84-695-8363-0
1773
una serie de decisiones sobre la base de las condiciones actuales, permitiendo organizar
y consolidar el trabajo en el marco de la Universidad de Costa Rica.
Planes estratgicos
La planificacin estratgica es vista como lo plantea Goi (2010), en una
prctica tcnica-poltica que las organizaciones promueven en un afn de establecer una
actuacin y un referente oportuno cuyo marco responde a las condiciones y al contexto
en que se desenvuelve.
La elaboracin de los planes estratgicos del Instituto se han realizado con un
grupo interno, as como una amplia participacin de diferentes colectivos relacionados
con el INIE en el marco de un trabajo colectivo. Basta decir que el proceso incorpor
las polticas universitarias y nacionales, orientando las acciones y los objetivos en
perspectiva. En el plan estratgico 2002-2008 se defini como misin del IIMEC-INIE,
las siguientes:
978-84-695-8363-0
1774
Eje # 1 Investigacin
y Docencia
Eje # 3
Eje # 2
Gestin Institucional
Accin Social
978-84-695-8363-0
1775
79
Documento del informe del Plan Estratgico 2009-2015 se encuentra en la siguiente direccin
http://www.inie.ucr.ac.cr/es/component/content/article/25-plan-estrategico/20-plan-estrategico.html
978-84-695-8363-0
1776
Eje 1
Investigacin
Eje 2
Eje 3 Vinculacin
Proyeccin Social
Eje 4 Gestin
Administrativa
80
978-84-695-8363-0
1777
Cuadro # 1
Distribucin de proyectos vigentes por ao en investigacin y accin social
Aos
Investigacin
Accin Social**
Totales
2002
34
5
39
2003
34
11
45
2004
38
8
46
2005
44
19
63
2006
43
18
61
2007
44
15
59
2008
49
25
74
2009
60
26
86
2010*
68*
19*
87*
Cuadro # 2
Distribucin de proyectos finalizados segn programa por ao. INIE, 2007-2011
Ao
Programa
2007
2008
2009
2010
2011
Total
17
Observatorio de la educacin
Educacin y genero
Actividad de investigacin
Educacin y contextos
socioculturales
Total
18
16
17
61
1. INVESTIGACION
2. ACCION SOCIAL
2002
2009
978-84-695-8363-0
2003
2010
2004
2005
2006
2007
1778
2008
20
40
60
80
Cantidad de proyectos
Eje de investigacin
En la ltima dcada, en el INIE se han constituido numerosos equipos
interdisciplinarios provenientes de diferentes unidades acadmicas y Sedes de la
Universidad de Costa Rica. El desarrollo de la investigacin educativa y la planificacin
de proyectos ha significado promover la formacin del personal que investiga desde las
limitaciones y fortalezas de los procesos generados.
La organizacin por medio de Programas ha permitido impulsar temticas y
problemticas que han venido variando a travs del tiempo. En el primer plan
estratgico se define la creacin de dos nuevos programas Mejoramiento de los
procesos de enseanza y aprendizaje, cuyo propsito es fortalecer el trabajo de aula
desde el nivel de preescolar a nivel de secundaria. Y el programa de Educacin y
Cultura con el fin de atender lo relacionado con la educacin no formal e informal.
Asimismo, el segundo plan une los programas de Educacin y Gnero y
Educacin y Cultura los cuales se integran en el denominado Educacin y contextos
socio-culturales. Se crea un nuevo programa Observatorio de Educacin Nacional y
Regional con el fin de responder a las necesidades de informacin sobre los procesos
educativos e incidir en la poltica pblica y en el contexto educativo costarricense, con
la pretensin de ser un programa regional.
La conformacin de los programas responde a un proceso de desarrollo que
evoluciona y requiere su consolidacin con recursos, que se logran sobre la base de las
posibilidades y oportunidades que se establecen producto de la experticia y la
consolidacin de equipos interdisciplinarios y sinergias con otras entidades.
Las investigaciones realizadas en el INIE entre los aos 2003-2007
corresponden en su gran mayora a un 80% de los proyectos inscritos definidos como
978-84-695-8363-0
1779
investigacin aplicada81, 14% como bsica y 5% de ellos son de tipo tecnolgico (INIE,
2008 a).
En el campo metodolgico los registros definen a la mayora como investigacin
cualitativa, seguida de la mixta (cuanti y cuali) y una cantidad menor con metodologa
cuantitativa. Los temas que ms se han trabajado estuvieron directamente vinculados a
la educacin formal, lo que tiene una lgica por la naturaleza y nfasis que el Instituto
tiene. Por otra parte y sin llegar a profundizar la informacin reportada por las y los
investigadores, el 45% de los proyectos se conciben con una perspectiva conceptual
interdisciplinaria 82 en concordancia con la investigacin en educacin que integra
diferentes corrientes y perspectivas que provienen del campo de las ciencias sociales en
general.
La investigacin de corte cualitativo es uno de los ejes de trabajo que se une al
desarrollo de posiciones crticas que buscan la comprensin de los procesos educativos
a profundidad. Tal como lo plantea Delgado (2002, 2008), los paradigmas de
investigacin responden a las diferentes tendencias sociales y en el caso de la
investigacin educativa de corte comprensivo, tambin son producto de una fuerte
crtica a las posiciones positivistas en la investigacin social.
El desarrollo investigativo del INIE se concreta y es posible por la participacin
y vinculacin con diferentes profesionales e instituciones. Por ello en algunas de estas
investigaciones se cuenta con la participacin activa de personal docente, estudiantes,
familias y otros profesionales en las instituciones escolares pblicas.
Docentes de diferentes unidades acadmicas de la Universidad, han participado
en el desarrollo de proyectos de investigacin tales como los siguientes: Escuelas de
Administracin Educativa, Escuela Sociologa y Antropologa, Escuela de Formacin
Docente, Escuela de Filologa, Escuela de Matemtica, Escuela de Orientacin y
Educacin Especial, Escuela de Trabajo Social, Psicologa, Escuela de Ciencias de la
Comunicacin Colectiva, Escuela de Lenguas Modernas, Escuela de Computacin e
Informtica, Escuela de Enfermera, Escuela de Historia, Escuela de Biologa, Escuela
de Odontologa, Escuela de Educacin Fsica y Deporte, as como la Sede del Atlntico,
Occidente y Guanacaste. Otras instancias que han colaborado: Observatorio del
Desarrollo, Centro Infantil Laboratorio, Sector Administrativo.
Con respecto a los diferentes temas que se han venido desarrollando en el
siguiente Cuadro #4 se resume de manera general las temticas abordadas.
81
Clasificacin que utiliza la Universidad para sealar que dichos trabajos tienen algn fin prctico. Esto
es congruente con el inters que subyace a la investigacin educativa para responder a necesidades y
problemticas en este campo.
82 Existe una diferencia en el uso de conceptuacin interdisciplinaria a grupos de trabajo
interdisciplinarios. El primer nfasis corresponde a la utilizacin de marcos de referencia desde distintas
disciplinas y no a profesionales reunidos para dar cuenta de una problemtica.
978-84-695-8363-0
1780
Cuadro #3
Algunos de los temas tratados en las investigaciones
Temtica
Educacin formal
Matemtica
Preescolar, primaria,
secundaria y universitaria.
Lenguaje (espaol)
Preescolar, primaria y
secundaria.
Otros
Ingls
Primaria y secundaria.
Investigacin-accin en el aula.
Primaria, secundaria y
universitaria.
Organizaciones comunitarias.
Secundaria y universidad.
Jvenes.
Sectores especficos.
Escueles Unidocentes
Educacin Indgenas
Educacin Superior
Asesoras particulares
Educacin y gnero
Educacin ambiental
Apoyo
al
universitario
sector
Investigacin educativa
83
En la pgina web del Instituto se encuentran algunos de los trabajos como los libros Palabras
Juguetonas que est en versin digital y de acceso gratuito http://inie.ucr.ac.cr/es/publicaciones.html De
igual manera se encuentra el Cyberlab que es un material en lnea que contribuye al reforzar la enseanza
del ingls http://cyberlab.ucr.ac.cr/
978-84-695-8363-0
1781
84
http://www.convivenciaescolar.net/wp/
978-84-695-8363-0
1782
2002
8
0
20
0
9
0
37
2003
4
0
21
0
5
0
30
2004
4
0
24
2
3
0
33
2005
7
0
44
4
3
10
68
2006
5
7
26
4
5
4
51
2007
7
2
18
2
4
7
40
2008
7
0
17
0
2
1
27
2009
10
0
13
0
2
6
31
Total
52
9
183
12
33
28
317
85
978-84-695-8363-0
1783
978-84-695-8363-0
1784
86
http://rina.inie.ucr.ac.cr/
978-84-695-8363-0
1785
978-84-695-8363-0
1786
Reflexiones finales
El IIMEC-INIE de la Facultad de Educacin desde su fundacin ofrece recursos,
planteamientos y experiencias para el mejoramiento de la calidad de la educacin
costarricense. En sus inicios realiz investigacin educativa con nfasis cuantitativo
dirigida a realizar diagnsticos del Sistema Educativo Nacional y las pruebas de
bachillerato. Posteriormente ejecutando investigacin en el aula con un enfoque
cualitativo, elaborando libros de textos, y en la ltima dcada se ha investigado sobre
los procesos de enseanza y aprendizaje que se desarrollan en las aulas (espaol,
matemtica, ingls) sobre la profesin docente, en contextos culturales diversos, las
relaciones de gnero en los contextos escolares, educacin superior, las tecnologas de
la informacin y comunicacin en los procesos educativos y se ha producido material
digital para el trabajo de aula (vdeos, juegos, sitios web, animatronics).
Un aspecto destacable de la dcada del 2000 es el esfuerzo realizado por el
Instituto por divulgar el conocimiento cientfico, el material didctico impreso y digital
que se produce a partir de la investigacin a lo largo y ancho del territorio nacional
87
978-84-695-8363-0
1787
978-84-695-8363-0
1788
Potenciar a largo plazo temticas y propuestas que puedan incidir en los problemas
educativos nacionales.
Referencias
Aguilar, A., Arroyo, H., Barrantes, I. y Vega J. (2010). Un Anlisis Crtico Del Estado
De La Investigacin Educativa Sobre Exclusin Del Sistema Educativo Formal,
Publicada En Costa Rica En El Periodo 2000 2009. San Jos: Costa Rica.
Anteproyecto de Seminario de Graduacin para optar al grado de Licenciatura en
Psicologa y Licenciatura en Enseanza de la Estudios Sociales. Sin publicar.
Castro, J. (2007). Instituto de Investigacin en Educacin. La extensin docente desde
la accin social: quinquenio 2003-2007. Revista Electrnica Actualidades
Investigativas
en
Educacin.
Vol.7,
N.
especial.
http://revista.inie.ucr.ac.cr/articulos/esp-2007/quinquenio.php
Consejo Universitario (1974). Estatuto Orgnico de la Universidad de Costa Rica. San
Jos: Costa Rica. Gaceta Oficial n 56. Octava edicin, actualizada 2005.
Delgado, F. (2002). La Investigacin Educativa, su concepcin y su prctica. Algunos
aspectos tericos para la reflexin y discusin. EDUCARE, Revista Venezolana de
Educacin,
16
(5).
Recuperado
el
03,
Junio,
2010
en:
http://redalyc.uaemex.mx/redalyc/pdf/356/35601605.pdf
De Sousa Santos, B. (2005). La Universidad en el siglo XXI. Para una reforma y
emancipadora de la Universidad. Mxico: Coleccin Educacin Superior. Centro
de Investigaciones interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades. UNAM.
Delgado, F. (2008). Costa Rica, retos actuales de la investigacin educativa.
Actualidades Investigativas en Educacin, 3 (8). Recuperado el 03, Junio, 2010
en: http://revista.inie.ucr.ac.cr/articulos/3-2008/archivos/retos/pdf
Gonzlez, Y. (2010). La rectora informa a la comunidad Universitaria. San Jos, Costa
Rica. Recuperado el 14 de septiembre.
http://www.rectoria.ucr.ac.cr/informe/index.php?option=com_content&view=art
icle&id=60:la-rectora-informa-a-la-comunidaduniversitaria&catid=2:noticias&Itemid=22
88
Rovira (2010), tan solo como ejemplo cuando detalla el accionar del Instituto de Investigaciones
Sociales de la UCR?
978-84-695-8363-0
1789
978-84-695-8363-0
1790
Pez, W. (2011). INIE en cifras. Periodo 2007-2011. San Jos: Costa Rica INIE. Sin
publicar.
Programa Estado de la Nacin Regin (2008). Estado de la Regin en Desarrollo
Humano Sostenible informe desde Centroamrica y para Centroamrica. San Jos,
Costa Rica: Estado de la Nacin.
Rovira, J. (2010). El Instituto de Investigaciones Sociales 1999-2009: Diez aos, un
proceso sostenido. Revista Reflexiones, 89 (1), 209-222.
978-84-695-8363-0
Patrocinadores:
Universitat dAlacant
Universidad de Alicante
Vicerectorat de Cultura, Esports i Poltica Lingstica
Vicerrectorado de Cultura, Deportes y Poltica Lingstica
Universitat dAlacant
Universidad de Alicante
Facultat dEducaci
Facultad de Educacin
1792