EL MITO COMO LENGUAJE

El texto propone explicitar algunas de las relaciones entre mito y

lenguaje. Al ser ambos ambiguos, se los trata de describir segn sistemas de
usos posibles. El presupuesto del cual se parte es que el mito es un
lenguaje. Los dos mundos estn correlacionados, pero el problema es que el
lenguaje es una instancia secundaria, mientras que el mito tiene una
doble situacin y se divide entre el acontecer (fijo) y el decir
(lingstico).

El decir es la nica manera que tenemos para acceder a ese acontecer,

no es fijo sino que pertenece a una lgica arrojada en el tiempo. El mito se
dio y lo fueron transfiriendo en trminos de decir, lingsticos, de
generacin en generacin en el tiempo.

El acontecer es la cara real (lo que sucedi) y el decir es cmo el

lenguaje se encarga de hacer sobrevivir ese hecho mtico hasta el da de
hoy en trminos concretos.

El acontecer sera diacrnico mientras que el decir sincrnico.

El acontecer fue uno solo que qued aislado en una temporalidad 0 que
nunca se logra definir en la historia; es diacrnico en el sentido de que hoy
no estamos en la temporalidad de ese suceder.
En cambio, el decir pretende ser sincrnico, no mutar y mantenerse
siempre en la misma configuracin lingstica, ya que una modificacin en
el modo de traducir el mito podra llegar a cambiar el mito mismo.
De acuerdo a qu se entienda por lenguaje habr de
entenderse qu es mito

Desde esta perspectiva, aparecen las modalidades de usos:

1. El mito como el decir sobre lo acontecido en illo tempore (algo
lejano en la historia, un pasado inmemorial)
2. El mito como el decir las cosas
3. El mito como doble sistema semiolgico, es decir, como
metalenguaje.

1. El mito como el decir sobre lo acontecido en illo tempore

En este captulo lo importante es la relacin entre el decir y el
acontecer. La conclusin a la que se llega de entrada es que la nica
forma de acceder al mito como acontecer es a travs del lenguaje,
del decir. La forma para analizarlo es a partir del lenguaje, y es ste el que
se encarga de reconectarnos con ese pasado inmemorial. Pero ese lenguaje
puede ser absolutamente ambiguo.
El relato mtico tiene por objeto traducir en trminos de lenguaje, lo sucedido
en un pasado inmemorial. Toda esta traduccin se realiza mediante un

sistema de doble relacin de similitud, en el cual el primero es fijo y el

otro opera como reflejo. El grado de verosimilitud del relato mtico depender
de qu sea el primer sistema y de su relacin con el segundo.
El tiempo es soporte de la relacin, sea crnica o diacrnica, entre los dos
sistemas. La diacrona aparece si al relato mtico se le asigna un presente y al
acaecer, un pasado. La sincrona, si el relato, transfigurado, disuelve el tiempo
ordinario en un eterno presente.
El acontecer viene a jugar un papel importante porque se convierte en un
relato, algo dicho que la memoria traduce para llegar a ac (2015, donde nos
paramos para ver el acontecer).
El artculo presenta dos posibilidades de analizar el trmino:
a) Es posible que su naturaleza se agote en el decir y que el relato tenga su
correlato con la fantasa; es decir, que la naturaleza misma del
acontecer se sustraiga al hecho de ser contado, no quiere ni puede ser
contado porque el horizonte de este acontecer excede la posibilidad de
entrar en el lenguaje humano. En consecuencia, el relato sobre esto
sera un relato metafrico. Pero tambin puede ser que el objetivo
mismo de este acontecer trate de no ser capturado por el lenguaje, en
consecuencia, todo lenguaje se vuelve engaoso.
Una de las posturas que se cita en el texto sobre la ambigedad del
lenguaje es la de Max Muller, que va a decir que puede haber
problemas lingsticos a partir de los cuales se tradujo el mito y
lleg el mito lingsticamente al da de hoy. Tres fenmenos y
problema lingsticos son: la metfora, la homonimia y la sinonimia.
Muchas veces, a lo largo del tiempo, desde el acontecer hasta la
construccin de un decir que llega hasta el 2015, este decir pudo
haber sufrido mutaciones en trminos de traduccin del pasado
inmemorial, gracias a la confusin que puede haber con respecto a esos
tres fenmenos.

La metfora tiene una condicin de sistema doble con predominio

de las asociaciones sustitutivas y esto la hace vulnerable. El
problema est en que, con el tiempo, no se llega a reconocer el
plano connotado, y se repite a la metfora como denotacin. Es
decir que ciertas generaciones que recibieron una metfora, la
repitieron no como metfora, sino como realidad absoluta; ac hay
un problema al acceder al pasado inmemorial porque hubo una
modificacin en el decir lingstico.
Ejemplo: cuando en el Genesis aparece la idea de Adn y Eva y
que Eva se crea de la costilla de Adn, eso hoy se cree como
realidad, pero en el origen pudo haber sido una metfora para decir
otra cosa, que hoy se perdi.
Otro ejemplo: en el Genesis, el Dios que crea el mundo en 7 das;
hoy se cree que cre al mundo en 7 das como los conocemos hoy

(24 hs), pero quiz originalmente eso era una metfora para decir
7 eras geolgicas.

En la homonimia, ante un significante tenemos dos significados.

Muchas veces se confunde, cuando el mito ya pierde el acceso con
la realidad, el significante como referencia al significado 1 cuando
en realidad en origen se quera referir al significado 2.
Ejemplo: el texto habla del mito de Deucalin. Deucalin le pregunta
a los dioses cmo repoblar la Tierra y estos le dicen que tiene que
tirarle piedras al cuerpo de su madre para que nazca la
muchedumbre. El problema es que piedras y muchedumbre tenan
el mismo significante lingstico en griego antiguo; entonces tal vez,
originalmente, en ambos casos era piedras
Otro ejemplo: la frase de Jess es ms fcil que un camello entre
en el ojo de una aguja que un rico entre al reino de los cielos. En
arameo antiguo, camello e hilo tenan el mismo significado;
entonces, si originalmente era hilo, s sera posible que un rico
vaya al cielo.

En la sinonimia tengo un significante 1 con su significado 1, pero

ese significante 1 tiene la posibilidad de un significado 2. El
problema es que tal vez para traducir el mito se considera que ese
significante 1 significa el significado 2 y encuentro un sinnimo
significante de ese significado 2, perdiendo completamente el
acceso al significado 1. El problema de la sinonimia es peor porque
es difcil encontrar el significado 1 que dio lugar a la confusin.

Otra cosa que seala el texto, mencionando a Tucdides como

excepcin, es que el mito se lo cree como realidad pero tiene un
lenguaje que tiende a la ficcin; pasa a no ser del todo creble por una
suerte de exageracin interna o analogas.

b) Un segundo modo de abordarlo consiste en el anlisis del primer trmino

de la proposicin y, en este caso, el segundo de la produccin. El
acontecer ha tenido lugar y el lenguaje lo captura temporalizndolo en
una naturaleza segunda: el lenguaje re-creado.
El lenguaje del mito remite a un acontecer primordial, pero, en s mismo,
significa en la medida en que refleja su condicin de arquetipo. En tanto
el reflejo lo vuelva transparente, permanecer siendo esa identidad
solidaria entre el decir y aquello a lo que el decir apunta. El lenguaje
constituido en una instancia mtica, proyecta en lejana la realidad de la
que deviene, desfigurndola u ocultndola. Se consideran entonces dos
nuevas perspectivas respecto a dicho ocultamiento:

Voluntario: el ocultamiento es producto de una intencin

manifiesta. La intencin encubridora del lenguaje mtico se da para
preservarla. El origen es tab. Si fuese tocado por el lenguaje en

razn de equivalencia, quedara reducido a una existencia

profanada. Esto convierte al lenguaje en smbolo o alegora. El mito
es el relato de lo que puede ser nombrado. Todo su decir se
condensa en el smbolo. En el mito como relato simblico, aparece
la relacin conjunta entre la expresin ahistrica y el
reconocimiento. Una comunidad mistrica oculta su conexin con lo
sagrado; los escritos de este pueblo eran bastantes ambiguos por el
uso de ese lenguaje codificado que solo ellos podan traducir. Esto
es porque lo sagrado, traducido en lenguaje, pierde valor. El
lenguaje saca la centralizacin del hecho primero, lo banaliza y le
saca sacralidad al objeto.
Ac viene la postura de Ricoeur, que analiza el smbolo y dice que el
relato simblico mtico se puede dividir en tres partes:
- mito-imagen: la imagen de ese acontecer vivida por las
personas que lo vieron. Es un tiempo escondido: un tiempo no
localizable, no se sabe cundo se dio y si se dio de la forma en que
se est narrando o no.
- mito-relato: es el tiempo agotado, un relato atemporal. Lo
accedemos como una suerte de eterno presente pero no se logra
saber efectivamente cundo se dio, cmo y por qu.
- mito-especulacin: es hermenutico. Es el proceso de
especular e intentar volver a acceder al mito-imagen original, a
travs de comparaciones con otros mitos, etc. No es real; siempre
es una especulacin.

Involuntario: no es intencional, sino que es dado por la propia

naturaleza del lenguaje. El lenguaje oculta, aleja, profana o
distorsiona la realidad porque el lenguaje es una categora muy
general en donde no sabemos bien el grado de fidelidad que tiene
esa reconstruccin lingstica con la realidad primera. El lenguaje se
encarga de alejarse de la realidad original y crea su propia realidad.
La relacin entre lenguaje y realidad falla porque el lenguaje tiene
otras categoras de traduccin (no puede ser preciso). Desde el
"acontecer" hasta el presente, el proceso del "decir" se encarga de
modificarse a s mismo y ocultar el pasado Hay
inmemorial
una contradiccin porque si bien
es verdad que la palabra aleja la
involuntariamente.

2. El mito como el decir las cosas

realidad, el mito por lo general cree

en el poder de la palabra

Se refiere al mito como la palabra que dice las cosas y al decirlas les confiere
entidad, sustantividad. La palabra tiene poder y por lo tanto, lo nombrado es.
De acuerdo a qu sea la naturaleza de lo nombrado puede haber dos variantes:
a) Lo nombrado permite la existencia de entidades naturales: es el
poder de la palabra que crea las cosas. En muchos mitos, hay una base en
el poder de la palabra.

Por ejemplo: los mitos de la creacin de la Tierra; hay un Dios que crea a
partir de la palabra. En estos mitos, primero tenemos la palabra como acto
creador, y despus se crea la materia. Dios dice "hgase la luz"; la luz se
hace, pero primero Dios est creando la palabra (crea el lenguaje antes que
la luz). Otro ejemplo: Dios egipcio que se auto-genera al nombrar su propio
nombre; ese Dios no existe hasta que de repente aparece la palabra. Al
origen de muchos mitos est la palabra como creadora, y por lo tanto la
palabra mtica tiene un poder muy fuerte y es una situacin lingstica
sagrada; ac es cuando el lenguaje se puede conectar con lo sagrado.
b) Lo nombrado no es (el no poder de la palabra): en principio, el hombre
primitivo tena una palabra-poder porque tena una mentalidad muy ritual.
O sea, el hombre primitivo se manejaba con una palabra que crea que iba a
tener un gran poder porque poda modificar las cosas de la naturaleza (por
ejemplo: la danza de la lluvia; mencionar el nombre de un objeto particular
para estar en contacto espiritual con ese objeto). Esta era una palabra
mgica o ritual.
El problema es que, efectivamente, la naturaleza no le responda. La
palabra mgica no funcionaba, y al no funcionar el hombre gener su propio
lenguaje ms cientfico y simblico. Ahora, la finalidad del lenguaje no era
entrar en contacto con una respuesta de la naturaleza. La palabra cientfica
est sentada en la razn, mientras que la mgica es ritual. Cuando el
hombre crea la palabra cientfica, empieza a vivir entre los smbolos. Deja
de creer en la naturaleza como tal y su propia naturaleza pasa a ser el
lenguaje. Hoy estamos sumergidos en esto: cada vez que recibimos una
verdad, recibimos una verdad lingstica.
Ejemplo: luego de Lutero, el cristianismo se dividi. El judeocristiano
catlico sigui sosteniendo que el acto de consagracin en el rito de la misa
no era un smbolo sino que ese pan y ese vino, eran cuerpo y sangre de
Cristo. Quiere decir que la palabra del sacerdote produca un acto de
sustantividad con lo cual le cambiaba la naturaleza especfica del pan y el
vino y lo converta en cuerpo y sangre. Desde el punto de vista de la iglesia
anglicana sigui sosteniendo eso pero, sobre la base del smbolo: en
realidad el rito de la misa no produca un acto de entidad sino que solo lo
simbolizaba.
El hombre adquiere categora humana porque tiene la libertad de hablar,
sino la tuviera no variara de los animales. Y con el lenguaje crea.

3. El mito como metalenguaje

Al mito se lo considera un metalenguaje que nace a partir de un
lenguaje-objeto. El lenguaje-objeto (el lenguaje primero que traduce la
realidad) es tomado como objeto del mito.
Cualquier significado puede ser objeto del habla mtica. Todo puede caer dentro
de la esfera del mito. El mito se sustenta en tanto a formas de la cotidianidad
del hombre.
El lenguaje-objeto tiene un significante y un significado concreto (ejemplo:
significado y significante piedra). Lo que hace el mito es desechar el

significado original del lenguaje objeto, heredando solo el significante y

agregndole un nuevo significado.
Por ejemplo: una piedra articulada en su contexto natural es slo eso. Pero, una
piedra narrada, adquiere una singularidad que la vuelve diferente. Se toma
su significante, pero a nivel significado se lo rellena con una sobrecarga mtica
que en origen no le perteneca para generar el mito del talismn. La materia
no vari, solo la forma que articula el contenido fue la que convirti a un objeto
de habla en habla mtica.
El mito pertenece al mbito de la semiologa porque su funcin es producir
significantes. Existen en el mito dos sistemas semiolgicos y uno est
desencajado respecto del otro:
- Lenguaje-objeto: es un sistema lingstico; el lenguaje del que el mito se
toma para construir su propio sistema.
- Metalenguaje: es el mito mismo y se llama as porque es una segunda lengua
en la cual se habla de la primera.
En el primer sistema, la piedra significa su pesadez, su textura, etc. Se torna
piedra-mito cuando es localizada por otro sistema que significa y carece de
expresin. Vaciado, pura forma, la llenan de otra historia que no le pertenece y
que ahora, en el segundo sistema, detenta como propia. En tanto que el mito
tenga vigencia, sus consumidores slo leern la historia y la piedra
permanecer escondida. Cuando estos consigan filtrarse e impongan sus
presencias, habrn recuperado sus respectivos sentidos y universos.
En el metalenguaje clsico (que aparece en "Elementos de semiologa") se
modifica el significante. En el caso del mito, se hereda el significante y se
agregan otros significados. El mito es un metalenguaje, pero utilizando el
esquema de la connotacin y no el del metalenguaje clsico. El mito se
comporta como una connotacin pero no es connotativa es un
metalenguaje en el que se invierte el esquema.
El elemento normal es
Significad
Significan
Piedra (1 nivel del
vaciado, queda como puro
lenguaje)(2
Significante
Significad
Talismn
nivel del
significante y es rellenado
o
lenguaje)
con otro significado.