Sistemas de Clasificación de La Vegetación
Sistemas de Clasificación de La Vegetación
Sistemas de Clasificación de La Vegetación
Sistemas de clasificación de la
vegetación
íIntroducción: La fitocenología
óDelimitación de la fitocenosis: criterios de homogeneidad
ó Homogeneidad composicional
ó Florística
ó Fisiognómica
Homogeneidad ecológica
Del biotopo
Dinámica o teselar
Catenal
óSistemas de clasificación
í Sistemas florísticos
ü El sistema de Zürich-Montpellier
La fitocenología es la parte de las ciencias de la vegetación que estudia las comunidades
vegetales bajo el supuesto (implícito) de que la vegetación puede ser compartimentada
en unidades de estudio discretas (las comunidades vegetales o fitocenosis, llamadas
también sinecias). Este enfoque implica dos consecuencias importantes:
La necesidad de trazar límites (sobre el terreno) que contengan esas fitocenosis.
La posibilidad y conveniencia de establecer un sistema de clasificación que
compare esas fitocenosis
Una vez delimitadas las fitocenosis, es posible estudiarlas como tales o compararlas
entre sí desde cualquier punto de vista, sea éste puramente composicional (sineciología)
o en su relación con el medio (sinecología). Si además logramos abstraer esas
fitocenosis y delimitar unidades clasificables, entraremos en el nivel de estudio "tipo de
comunidad", tal y como introducimos en el tema 1.
En este tema abordaremos las implicaciones derivadas de la delimitación de unidades de
vegetación en el campo para, una vez solucionado este problema práctico, abordar el
estudio de los sistemas de clasificación de las fitocenosis más utilizados o conocidos.
Delimitación de la fitocenosis
La vegetación a menudo cambia sobre la superficie de la Tierra o en el tiempo de
manera más o menos gradual. La delimitación de las unidades de vegetación sobre el
terreno es un problema práctico que tiene que ver con el establecimiento de criterios de
homogeneidad que permitan asumir un cambio determinado en la vegetación como un
cambio de fitocenosis. De este modo, entenderemos que nos encontramos dentro de una
fitocenosis mientras la homogeneidad, siguiendo un criterio determinado, no se rompe.
Por ejemplo, si nuestro criterio de homogeneidad es de composición florística
(taxonómica), un cambio en la fitocenosis será detectado cuando cambia la composición
en una medida determinada fijada de antemano (por ejemplo: cambio de la especie
dominante).
Los criterios de homogeneidad habituales son:
Homogeneidad composicional: según composición entendida como identidad y
proporciones de los diferentes tipos de individuos. Puede ser:
Florística: los tipos de individuos son táxones (especies, etc).
Fisiognómica: los tipos de individuos son tipos morfológicos o
funcionales.
Homogeneidad ecológica: la homogeneidad es del medio, no de la comunidad;
es decir, se consideran los cambios en el medio como definitorios de los límites
de las fitocenosis con independencia de lo que ocurra con la composición. Puede
ser:
Del biotopo de la fitocenosis (fitotopo): homogeneidad en las
características físicas o bióticas del medio; si éstas cambian en una
medida predeterminada, se interpreta que se está en otra fitocenosis.
Dinámica o teselar: se define la fitocenosis por la comunidad climácica
a la que tiende, o si se quiere por su pertenencia a una misma serie de
vegetación (en el sentido de Clements); así, mientras una superficie de
terreno contenga especies y comunidades que tienden que representan
fases de la sucesión tendenets a una misma clímax, estaremos dentro de
la misma fitocenosis dinámica. Una tesela es una superficie de terreno
con esa propiedad. Así, el paisaje puede ser muy variado en cuanto a las
fitocenosis composicionales que alberga, pero lo es mucho menos en lo
que respecta a su contenido de fitocenosis dinámicas o, lo que es
equivalente, de teselas.
Catenal: en este caso definimos una fitocenosis catenal como el
conjunto de fitocenosis composicionales o dinámicas que se ordenan
según los gradientes normales en el territorio. Así, cada territorio tendrá
una cliserie altitudinal típica (una fitocenosis catenal definida por el
gradiente de altitud), pero también catenas generadas por gradientes de
humedad (distancia a los cauces de los ríos) u otras.
Sistemas de clasificación
Un sistema de clasificación es, basicamente, una construcción en la que se considera
que las fitocenosis, esto es, las comunidades vegetales observables y delimitables en el
campo, pueden ser representados por entidades abstractas otipos de
comunidades (asociaciones, formaciones, etc) que resumen las propiedades "medias"
(por ejemplo, la "composición media") de las fitocenosis observables que representan.
Un ejemplo. En un territorio observamos un cierto número de bosques de encinas: estos
bosques reales, concretos, serían las fitocenosis, las comunidades vegetales delimitables
sobre el terreno. Ahora bien, dado que todos ellos comparten entre sí ciertas
características (por ejemplo composicionales: la encina es la especie dominante),
podemos crear un tipo de comunidad que los represente: el encinar. El encinar es una
entidad abstracta, un elemento de clasificación de la vegetación que representa al
promedio de todos los bosques de encina reales. Un símil frecuentemente usado que
aclara la idea es: la fitocenosis es al individuo como el tipo de comunidad (tipo de
fitocenosis) es a la especie taxonómica. O, en general, la fitocenosis es al individuo
como el tipo de individuo es al tipo de fitocenosis.
Queda claro que una vez delimitadas estas unidades abstractas (tipos de comunidades o
de fitocenosis) es posible acometer una clasificación de estas unidades según su
semejanzas o diferencias o según el criterio que se considere oportuno.
Las diferencias entre sistemas de clasificación concretos se fundamentan en primer
término en el modo como se entiende la homogeneidad a la hora de definir las
fitocenosis. Así, se pueden clasificar en:
Sistemas florísticos
Sistemas fisiognómicos
Sistemas ecológicos
Sistemas mixtos (utilizan una mezcla de varios criterios de homogeneidad)
Sistemas florísticos
En ellos se define la fitocenosis según criterios de homogeneidad composicional y
florística. Existen dos grandes subgrupos:
Sistemas florísticos basados en la dominancia
Sistemas florísticos basados en la constancia
En ellos se considera la variación en los elementos dominantes (por cobertura, estatura,
etc) de la comunidad como determinante de los cambios de fitocensis. Por ejemplo, un
bosque de encinas se llamará encinar con independencia de la composición del cortejo
subordinado al árbol dominante: mientras la encina domine, estaremos ante un encinar
en nuestro sistema de clasificación. Si ésta cambia, por ejemplo a roble, se considerará
que la fitocenosis es distinta (un robledal) con independencia de que el cortejo florístico
haya cambiado o no respecto al encinar.
Estos sistemas tienen la ventaja de que son más fáciles de implantar que los sistemas
basados en la constancia por cuanto sólo tienen en cuenta una parte de la composición,
habitualmente la más visible y, generalmente, la mejor conocida taxonómicamente
(especies leñosas, árboles, etc). Son sistemas que, por el contrario, encuentran
dificultades cuando se enfrentan a comunidades en las que no hay especies claramente
dominantes.
Este tipo de clasificaciones han sido las más utilizadas históricamente en territorios
templados amplios, relativamente poco poblados hasta tiempos recientes, que contaban
con fitocenosis relativamente bien conservadas, en general claramente dominadas por
elementos de la clímax (escuela norteamericana, escuela rusa).
Son sistemas que requieren un profundo conocimiento taxonómico de la flora de un
territorio antes de que sea posible su establecimiento. Por el contrario, al menos en
teoría, son capaces de clasificar hasta las variaciones más sutiles en la vegetación.
Los sistemas basados en la constancia han sido predominantemente utilizados en
territorios con fuertes procesos dinámicos y con paisajes naturales fragmentados como
consecuencia de una ocupación humana antigua e intensa (escuelas europeas). En esta
circunstancia han sido determinantes la gran variación de la vegetación resultante de la
abundancia de situaciones seriales, en las que no hay una dominante clara, junto con la
fácil delimitación de las fitocenosis reales derivada de la compartimentación artificial
del paisaje.
El sistema de Zürich-Montpellier
El sistema florístico de tradición europea más conocido es el de la llamada escuela de
ZürichMontpellier (también: escuela fitosociológica, escuela sigmatista). Este sistema
de clasificación fue desarrollado fundamentalmente por el geobotánico suizo Blaun
Blanquet (iniciado por Schröter, en Zürich, y por Flahault, en Montpellier). Es un
sistema teóricamente basado en la constancia, aunque en su aplicación práctica
considera a menudo criterios de dominancia, sobre todo a la hora de clasificar
vegetación forestal. El sistema se basa en los siguientes principios:
La asociación es el tipo de fitocenosis básico del sistema. Las fitocenosis
("individuos de asociación") se delimitan según criterios composicionales
florísticos de constancia.
Las asociaciones se clasifican en un sistema jerárquico que las agrupa según
sus parecidos composicionales. Así, se establecen unidades tipológicas por
encima del nivel básico de asociación: alianza, orden, clase, división, ampliables
con los prefijos "sub" y "super" cuando la complejidad de la vegetación
clasificada lo aconseje. El método es claramente reminiscente de los sistemas
clasificatorios taxonómicos (especie, género, familia, etc). Estas unidades
tipológicas se llaman colectivamente sintáxones (o sintaxa); de nuevo a imagen
de la taxonomía (táxones o taxa). De la clasificación en sintaxones se ocuparía
la sintaxonomía, y la clasificación resultante es una clasificación sintaxonómica.
La asociación y cualquier otro sintaxon de orden superior o inferior presentan
una composición característica que los define. Es decir, es el conjunto de los
taxa habitualmente presentes en las fitocenosis representadas por un sitaxon
concreto el que define este, y no la presencia de dominantes o cualquier otro
elemento preferente.
Se define fidelidad como la frecuencia con que un taxon aparece en las
fitocenosis reales clasificadas bajo un sintaxon determinado en comparación con
la frecuencia con que aparece en otros sintaxa. La composición de una
fitocenosis determinada (de un individuo de asociación) contendrá varios tipos
de taxa según su fidelidad. En el extremo, cabe diferenciar entre:
Especies característicasde un sintaxon. Son aquellas que están siempre
presentes en el sintaxon al que pertenece la fitocenosis y, en principio,
sólo presentes en él. Así,será posible asignar una fitocenosis determinada
al sintaxon concreto con sólo observar la presencia de sus especies
características.
Especies compañeras, que nutren el resto de la composición de la
fitocenosis. Son especies de amplia distribución geográfica o ecológica,
no determinantes de un sintaxon en concreto.
Existen también las llamadas especies diferenciales (llamadas a
veces especies características territoriales). Se trata de especies que, sin
ser características de un sintaxon tomado el edificio sintaxonómico en su
conjunto (toda la clasificación), si que permiten denunciarlo cuando nos
encontramos dentro de un espacio florístico determinado. Un ejemplo
(ficticio): la presencia de serbal de cazadores en el Sistema Central
español (que es un territorio florístico concreto) determina que la
fitocenosis observada (individuo de asociación) es un hayedo
(asociación); sin embargo el serbal de cazadores no es exclusivo de
hayedos cuando consideramos el conjunto de la clasificación
sintaxonómica del continente europeo.
La denominación de los sintaxa sigue unas reglas fijas y determinadas y se basa
en el principio de prioridad en la autoría y en la declaración de un inventario
tipo representativo del sintaxon elegido entre un conjunto de muestras (datos de
composición) que representan fitocenosis (individuos de asociación) concretos y
reales. El paralelismo con el modo en que funciona la taxonomía es patente.
Estas reglas y los detalles sobre el modo de designar tipos y autorías vienen
recogidos en el Código Internacional de Nomenclatura Fitosociológica (Izco
2003, para la edición española).
Simplificando: los nombres de los sintaxa se construyen tomando los nombres
científicos de una o dos especies de la composición habitual del sintaxon y añadiendo
desinencias específicas que denotan el rango sintaxonómico. Por ejemplo:
Quercetea ilicises la clase sintaxonómica para los bosques y matorrales
esclerófilos del Mediterráneo: desinencia etea (clase).
Fagetalia sylvaticaees el orden sintaxonómico para los hayedos europeos:
desinencia etalia (orden)
Oleo europaeaeCeratonion silicuaees la alianza sintaxonómica para las
arbustedas termófilas del Mediterráneo occidental: desinencia ion (alianza)
Junipero thuriferaeQuercetum rotundifoliaees la asociación de los encinares de
media montaña del centro de la Península Ibérica: desinencia etum (asociación)
Etimológiamente, "etum" significa "conjunto de". Así, un quercetum es, literalmente, un
conjunto de quercus o de encinas: es decir, un encinar. Las demás desinencias son
arbitarias.
Dentro de la escuela fitosociológica europea, los sintaxa (unidades florísticas) son
utilizados para construir sistemas de clasificación de fundamento ecológico, sobre todo
sistemas dinámicos y catenales (son llamados a veces clasificaciones paisajísticas). Para
ello se suelen establecer reglas para la denominación de las series de vegetación y las
catenas de cada territorio florístico utilizando los nombres de los sintaxa que contienen.
Por ejemplo, las series de vegetación se designan por el nombre de la comunidad
climácica a la que se añaden determinadas desinencias. Las catenas se nombran, de
manera mucho más descriptiva, utilizando el conjunto de los nombres de las series que
agrupan separados por un elemento tipográfico determiando (por ejemplo, ":").
Existen muy pocos sistemas fisiognómicos o ecológicos puros, siendo mucho más
frecuentes los sitemas en los que se combinan ambos criterios o incluso se tienen en
cuenta criterios florísticos. Las clasificaciones paisajísticas de la escuela fitosociológica
europea son, de hecho, sistemas mixtos: ecológicos y florísticos.
En principio, un sistema fisiognómico define la formación como la unidad abstracta
básica (el tipo de comunidad básico del sistema), equivalente a la asociación de muchos
sistema florísticos. Las fitocenosis concretas (individuos de formación) pertenencientes
a una formación determinada comparten entre sí la presencia de la misma (parecida)
composición en cuanto a tipos morfológicos o funcionales. Así, definiremos la
formación "bosque caducifolio" por la dominancia en su composición de árboles
caducifolios. Los sistemas fisiognómicos, al menos en teoría y al igual que los
florísticos, pueden estar basados en la dominancia o en la constancia.
Algunos ejemplos de sistemas fisiognómicos, ecológicos o mixtos son:
Es un sistema que pretende ser fisiognómico puro y en el que, aunque en las
definiciones utiliza criterios aparentemente ecológicos, en realidad sus unidades son
claramente diferenciables por las características morfológicas y funcionales de los
elementos de la composición. Establece las siguientes formaciones:
LIGNOSA: formaciones dominadas por plantas leñosas
Pluviilignosa: formaciones siempreverdes de hoja ancha lauroide
ecuatoriales
Laurilignosa: formaciones siempreverdes de hoja ancha lauroide
tropicales y subtropicales
Durilignosa: formaciones de hoja ancha esclerófila
Ericilignosa: formaciones de hoja ericoide (brezales)
Aestilignosa: formaciones de hoja ancha caduca por sequía
Hiemilignosa: formaciones de hoja ancha caduca por frío
Aciculilignosa: formaciones de hoja acicular o escuamiforme (coniferas)
HERBOSA: formaciones dominadas por plantas herbaceas
Terriherbosa: formaciones herbáceas terrestres
Aquiherbosa: formaciones herbáceas acuáticas pero enraizadas
DESERTA: formaciones abiertas, con plantas dispersas
Siccideserta: desiertos cálidos
Frigorideserta: desiertos fríos
Litorideserta: vegetación dispersa de costas azotadas por la brisa salina
(maresía)
Mobilideserta: vegetación dispersa de sustratos inestables (dunas,
canchales)
Rupideserta y saxideserta: vegetación rupícola
ERRANTIA: formaciones de plantas no enraizadas
Aquierrantia: de medios acuáticos
Solerrantia: microflora edáfica (fitoedafon; unicelulares)
Aererrantia: microflora aérea (aeroplancton; polen, esporas, propágulos,
etc)
Históricamente, es una de las primeras clasificaciones de la vegetación del mundo en su
conjunto, junto con la de BrockmannJerosch y Rübel (en realidad se asemeja a una
versión simplificada de aquélla). Comprende las siguientes formaciones:
Bosque de lluvias tropical
Bosque de lluvias subtropical
Bosque monzónico
Bosque de lluvias templado
Bosque decíduo templado
Bosque aciculifolio
Bosque de frondosas siempreverde
Sabana boscosa
Bosque y matorral espinosos
Sabana
Estepa y semidesierto
Brezal
Desierto seco
Tundra y matorral criófilo
Desierto frío
Puede consultarse en: Schimper y von Faber (1935).
Quizá sea una de las pocas clasificaciones ecológicas puras que existen. Huguet del
Villar tuvo la virtud con esta clasificación de establecer o refrendar una terminología
muy precisa para determinar los hábitats en los que viven las plantas. Establece
unidades con nombres muy significativos, como: limnophytia, psychrophytia,
xerophytia, halophytia, psammophytia, petrophytia, etc. En el fondo se trata de una
clasificación de los hábitats de las plantas.
La clasificación puede consultarse en Huguet del Villar (1929).
Diseñada por este organismo internacional para confeccionar su mapa de la vegetación
del mundo (escala 1:1000000). Es un sistema jerárquico, que parte de cinco "clases de
formación" (bosque cerrado, sabana, matorral, matorral bajo, vegatación herbácea), las
cuáles se subdividen en "sublclases de formación" (bosque siempreverde, bosque
decíduo y bosque xeromórfico para la clase "I. Bosque cerrado"). Clases y subclases se
diferencian por criterios fundamentalmente fisiognómicos. Por debajo de las subclases,
se establecen las "formaciones" como tales, usando una mezcla de criterios
fisiognómicos o ecológicos a conveniencia. En total distingue unas cincuenta
formaciones (algunos ejemplos: bosque ombrófilo subtropical, bosque espinoso, sabana
siempreverde de hoja ancha, matorral decíduo por frío, tundra fundamentalmente
liquénica, pradera alta sin estrato leñoso, comunidades flotantes de agua dulce, etc).
Esta clasificación puede consultarse en UNESCO (1973).
Walter considera que, a escala de grandes unidades globales, clima, suelos y vegetación
son tres partes de una misma realidad ya que unos dependen de otros. Así, establece lo
que llama zonobiomas para diferenciar estas grandes unidades ecológicas. Atendiendo
a climas y formaciones asociadas, los zonobiomas son:
Zonobioma Clima VegetaciónI ecuatorial
lluvioso bosque siempreverde tropical
IX polar tundra
Cada zonobioma tiene asociado además un tipo de suelo característico. Walter identifica
sus zonobiomas con la variación "zonal" de los ecosistemas sobre la Tierra, esto es, en
principio, por grandes bandas latitudinales, pero matiza admitiendo variaciones locales
dentro de cada zonobioma: pedobiomas (por suelo) y orobiomas (por altitud). Además
admite que la separación entre zonobiomas puede ser no neta: zonoecotonos.
La versión más reciente de la clasificación de Walter se recoge en la revisión de su ya
clásico texto realizada por Breckle (2002).
Schultz recoge la idea de Walter y las perfila, definiendo cada gran zona ecológica de la
Tierra (que llama ecozonas) con el concurso de todos los componentes significativos
del ecosistema entendiendo éste como un conjunto inseparable: parámetros climáticos y
edáficos precisos, tipos de vegetación, fauna asociada, etc. Las ecozonas de Schultz son:
Ecozona polar/subpolar
Ecozona boreal
Ecozona de latitudes medias húmedas
Ecozona de latitudes medias áridas
Ecozona subtropical húmeda
Ecozona subtropical mediterránea
Ecozona árida subtropicaltropical
Ecozona tropical estacional
Ecozona tropical húmeda
Esta clasificación se recoge en Schultz (1995).
Referencias
Huguet del Villar, E. 1929. Geobotánica. Ed. Labor. Barcelona. 338 pp.
Izco, J. 2003. Código internacional de nomenclatura fitosociológica. Ed. Univ. de La
Laguna. 151 pp.
UNESCO 1973. International classification and mapping of vegetation. Unesco, Paris.
Schultz, J. 1995. The ecozones of the world. The ecological divisions of the
geobiosphere. SpringerVerlag. Berlín. 449 pp.
Breckle, SW. (ed.) 2002. Walter's Vegetation of the Earth. The Ecological Systems of
the GeoBiosphere. Springer. Berlín. 547 pp.
BraunBlanquet, J. 1979. Fitosociología. Bases para el estudio de las comunidades
vegetales. H. Blume. Madrid. 820 pp.[Para el estudio de los métodos de la escuela de
ZürichMontpellier]